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PARTE PRIMERA

LO IMPLÍCITO EN LA NOCIÓN DE CRIOLLISMO


Algunos antecedentes y usos del término criollo

Fig. 2. Anónimo mexicano, De español y negra. Mulato, s. XVII, Colección Museo de América, Madrid.

Fig. 3. Anónimo mexicano. De mestizo e india: sale coiote. s. XVII, Colección Museo de América, Madrid.
En sus inicios, el término nombraba a los españoles criollos 1, habitantes de las
provincias americanas y luego pasó a designar a quienes gobernaban por su
propia cuenta las repúblicas recientemente independizadas de las potencias
imperiales europeas, en las sociedades acriolladas de América. Esos criollos 2
implantaron gobiernos en los que la participación de los mestizos y
aborígenes, cuando se permitía, era muy escasa pues los gobiernos
republicanos de la América postprovincial estaban constituidos, casi
exclusivamente, por blancos criollos. El término pasa luego también a nombrar
a los hijos de esclavos negros nacidos en América ─ especialmente en Cuba
─ para extenderse más tarde y referirse a todos los descendientes de
españoles nacidos en el continente americano. Lo criollo pasará entonces a
representar lo mestizo con exclusión de lo indio ─ como en los países del
Cono Sur ─ y, ya en el siglo XX, habrá quienes designen como criolla toda
producción americana por oposición a la extranjera.

Fig. 3. Anónimo mexicano, De español y mestiza. Castiza, ca. s. XVII. Museo de América, Madrid.
En las repúblicas americanas hispanohablantes 3 el término subrayaba
también lo local, referido tanto a la filiación biológica de un individuo como
a su posición socio-política, ubicándolo con respecto a su linaje y su
pertenencia a una clase social y una nación, lo que ya anunciaba un vínculo
entre criollismo y nacionalismo 4. No es casual que el criollismo como categoría
socioestética surja después de que se haya comprobado la inoperancia de los
modelos decimonónicos positivistas que intentaban explicar los fenómenos
de la cultura, con base en conceptos tales como raza y posteriormente el de
etnia. Al surgir la noción de mestizaje 5, tenida a lo largo del siglo XIX como
causa de degeneración de la sociedad, culpable de que surgieran grupos de
razas inferiores de población, el concepto es elevado a la categoría de mito 6
para luego verlo surgir con notoriedad dentro de la mitología republicana
neomundista como americanidad 7, noción que se añade a la ya para entonces
vasta serie de utopías y mitos americanos. Leamos a Alejandro de Humboldt 8
en un revelador texto de 1822 sobre el particular:

Entre los habitantes de raza pura ocuparían el segundo lugar los


blancos, si no se hubiese de atender sino al número de ellos.
Divídense en blancos nacidos en Europa y en descendientes de
europeos nacidos en las colonias españolas de la América o en las
islas asiáticas. A los primeros se les da el nombre de chapetones o
de gachupines, a los segundos, el de criollos. Los naturales de las
islas Canarias, a quienes se designa generalmente con la
denominación de isleños y que son los capataces de las haciendas, se
consideran como europeos. Las leyes españolas conceden unos mismos
derechos a todos los blancos; pero los encargados de la ejecución de
las leyes buscan todos los medios de destruir una igualdad que
ofende el orgullo europeo. El gobierno, desconfiado de los criollos,
da los empleos importantes exclusivamente a naturales de la España
antigua, y aun, de algunos años a esta parte, se disponía en Madrid
de los empleos más pequeños en la administración de aduanas o del
tabaco. En una época en que todo concurría a aflojar los resortes del
estado, hizo la venalidad espantosos progresos: las más de las veces
no era una política suspicaz y desconfiada, sino el mero interés
pecuniario el que distribuía todos los empleos entre los europeos. De
aquí han resultado mil motivos de celos y de odio perpetuo entre los
chapetones y los criollos. El más miserable europeo, sin
educación y sin cultivo de su entendimiento, se cree superior a los
blancos nacidos en el Nuevo Continente; y sabe que con la protección
de sus compatriotas, y en una de tantas casualidades como ocurren
en parajes donde se adquiere la fortuna tan rápidamente como se
destruye, puede algún día llegar a puestos cuyo acceso está casi
cerrado a los nacidos en el país, por más que éstos se distingan en
saber y en calidades morales. Los criollos prefieren que se les llame
americanos; y desde la paz de Versalles y, especialmente, después
de 1789 se les oye decir muchas veces con orgullo: '`Yo no soy
español, soy americano'; palabras que descubren los síntomas de un
antiguo resentimiento. Delante de la ley todo criollo blanco es
español; pero el abuso de las leyes, la falsa dirección del gobierno
provincial, el ejemplo de los estados confederados de la América
Septentrional y el influjo de las opiniones del siglo, han aflojado los
vínculos que en otro tiempo unían más íntimamente a los españoles
criollos con los españoles europeos [...].

Sabemos que en casi todas las regiones de América adjetivadas con el


término latina 9 se desarrollaron durante varios siglos procesos violentos de
destrucción cultural, mestizaje forzado e hibridación de culturas y que estos
procesos afectaron en mayor o menor grado prácticamente a todas las
comunidades aborígenes del continente. Se consolidaría así la hegemonía de
las elites blancas, ubicadas ya para el periodo que siguió a las guerras de
conquista en la cúspide de pirámides demográficas netamente estratificadas.
Fueron esas élites las que impusieron sus propias culturas concebidas como
una y única Cultura occidental 10 importada, europea y cosmopolita. La cultura
blanca dominante fue entonces impuesta, casi siempre de forma violenta, a los
estratos más bajos de la población nativa conformada por una base de
indios 11 que integraban las poblaciones autóctonas a las que se añadirían a
partir de fines del siglo XVII, los esclavos negros importados de África.
Eran estas las clases que constituían la base de la pirámide social americana,
mantenidas en situación de servidumbre y cuyas culturas eran diversas pues
sus configuraciones variaban tanto según la presencia, cantidad y fortaleza
de los vestigios de las culturas de origen de cada grupo sometido por los
conquistadores 12 como por la influencia de la cultura del grupo conquistador
dominante, lo que resultaba en hibridaciones y mezclas únicas con gran
diversidad de tradiciones, mitos, ritos, creencias y prácticas socioculturales.
En cada uno de estos grupos humanos se generaban procesos colectivos de
identificación con la propia cultura de origen, lo que resultaba en la
configuración de identidades culturales colectivas 13 que constituían focos de
resistencia cultural en diversas regiones de la América hispanizada.

Fig. 4 Diego Muñoz de Camargo. Lienzo de Tlaxcala. La noche triste, ca. 1585. Copia de la Benson Latin
American Collection, Universidad de Texas, Austin

Ya entrado el siglo XIX, uno de los mitos introducidos por el pensamiento


positivista con mayor arraigo en las visiones del mundo de las élites criollas
del Nuevo Mundo, fue el de la modernidad americana 14. Como aspiración
utópica de progreso en la América lusohispana, la modernización se
caracterizó, entre otras cosas, por una producción de discursos culturales y
artísticos destinados a disimular procesos decididamente violentos de
explotación y aculturación 15 al vestirlos de un ropaje positivo justificado por
la idea de progreso. Las élites criollas latinoamericanas esperaban que por obra
de la modernización y como efecto de nuevas energías inculcadas por los
modernizadores en las poblaciones mestizas, estas fueran vistas como una
nueva raza americana 16, que llegaría a la superación de ideas y prácticas
socioculturales que entraban en conflicto con las innovaciones que trataban
de introducir los modernizadores, fundamentalmente en los procesos de
explotación de la tierra y extracción de los valiosos recursos mineros que
guardaba el suelo americano. Con esas expectativas emergería y se
mantendría presente en las élites criollas del Nuevo Continente el mito de la
modernidad americana. Muchos intelectuales, en el contexto de las nuevas
mezclas culturales en las distintas repúblicas americanas, saludaron la
configuración de las neoculturas americanas 17 desde una perspectiva criolla y
neonatalista y dieron la bienvenida a una aspiración utópica de progreso y
modernización. Esta aspiración de superación de la pobreza y el atraso en
que vivían grandes contingentes de latinoamericanos puede ser vista en la
obra de muchos artistas que reflejaron esos enfoques positivos, desde fechas
tan tempranas como el año de 1600. 18
Fig. 5. Mercator, Gerardo. América Sivi India Nova et Magnae. Gerardi Mercatoris, 1602

No obstante el racismo imperante en la segunda mitad del siglo XIX y en el


contexto de sociedades latinoamericanas recién independizadas, con su
noción de superioridad de la raza blanca, los blancos dominantes no podían
dejar de reconocer los méritos de los mestizos que ocupaban y habían
ocupado desde los inicios de la colonización los nichos reservados a las
prácticas de los diversos oficios artesanales, a los siervos y a los esclavos.
Por encima de todos sus prejuicios, los blancos criollos dominantes debieron
reconocer el valor y destreza de los mestizos que se desempeñaron como
heroicos oficiales y soldados en las gestas de independencia, que además
fueron excelentes cronistas, intérpretes y traductores cuyos esfuerzos y
obras contribuyeron de manera decidida con los procesos de integración
política, cultural y social en ese difícil período. La importancia de sus
aportes se agranda si consideramos que, luego de los contactos
interculturales iniciales producto de las guerras de conquista, las relaciones
entre los blancos criollos y los mestizos se habían comenzado a fracturar. Los
mestizos fueron vistos como resultado de mezclas que se tenían por
procesos de degeneración racial y se daba mayor valor entonces al indio
como exponente de pureza racial superior al mestizo. Muchos españoles y
blancos criollos notables asumieron desde muy temprano, durante la conquista,
la defensa de los indígenas para reivindicar diversos grados de pureza étnica del
aborigen, ya que se suponía que esa pureza portaba consigo también la pureza
moral, lo que sirvió de base a las primeras manifestaciones de indigenismo 19 en
América Latina.

Fig. 6. Códice Florentino. Ca. 1570-1586. Página XI. Poctecas. Biblioteca Medicea-Laurenziana, Florencia.

Tanto en la América recién conquistada y provincial como posteriormente


en la republicana e independiente, la glorificación indigenista corría paralela a
la consideración de lo occidental como dañino y contaminante, junto a una
percepción negativa de las nociones de tecnología, progreso, ciencia y razón
contenidas en el concepto de modernización. El indigenismo llevaba entonces
implícito un rechazo radical hacia lo nuevo y lo extranjero, en nombre de lo
puro y originario en lo que se conoce como tecnotropismo negativo 20. El
indigenismo sería entonces por definición americano y sobre todo
latinoamericano. En tanto y cuanto mito, el indigenismo está fuertemente
vinculado a los del eterno retorno, la edad de oro, el buen salvaje y otros que
relacionan el terror atávico del hombre a hechos supuestamente
inexplicables 21. El indigenismo valora entonces lo primigenio, lo anterior, lo
supuestamente incontaminado en una remota edad de oro aborigen y rechaza lo
novedoso por considerarlo ajeno. El componente indigenista en las culturas
latinoamericanas reviste una gran importancia y de allí las confrontaciones
entre las visiones del mundo que privilegian la modernización en América
Latina y las que propugnan la vuelta a los orígenes de lo americano
autóctono, polarización presente hasta hoy en las culturas de América
Latina.

Fig. 7. Michelena, Arturo, Miranda en La Carraca. 1896, óleo sobre tela, 197 x 245, 2 cm.
Colección GAN, Caracas.

Un ejemplo de interés de la perspectiva indigenista es el proyecto político


que, en 1790, el criollo venezolano Francisco de Miranda 22 presentó al Primer
Ministro Inglés William Pitt. Miranda proponía una visión de un continente
americano organizado políticamente en un conjunto de naciones federadas,
constituido por territorios emancipados del dominio español y regido por la
figura de un emperador que llevaría el título de Inca, nombre que daba a los
gobernantes de sus proyectos políticos. A los gobernadores de las provincias
les daba el nombre curacas, voz quechua que a sus ojos legitimaba en la
nomenclatura independentista al componente indígena al darle
reconocimiento a la presencia de grandes contingentes de indígenas y
mestizos que poblaban la zona andina del continente latinoamericano y que
debían ser ganados para la causa patriota. Es también durante los conflictos
independentistas de la América hispanizada cuando son reivindicadas las
figuras de los héroes de la resistencia indígena que se opusieron a la
conquista española, tales como Monctezuma, Guatimosín, Atahualpa y
Túpac Amaru, o Guacaipuro. Las menciones de estos héroes indígenas que
se enfrentaron a los españoles y canarios por parte de los criollos que
liderizaron movimientos antiespañoles de emancipación, era una forma de
asegurar la simpatía y adhesión a la causa patriota de esos grandes
contingentes de poblaciones indígenas y mestizas. Es también entonces
cuando al diseñarse los símbolos y emblemas patrios de las nuevas
repúblicas americanas se incluyen íconos indígenas tales como el sol incaico y el
cóndor. La iconografía republicana recibe entonces el alimento de los mitos
aborígenes y estos invaden las banderas y escudos de las nuevas repúblicas y
se hacen presentes en las letras de los himnos patrios, invocando las hazañas
de la resistencia aborigen. Las toponimias locales también rescatarán sus
nombres originarios y América Latina perfilará su iconografía republicana
con el rico aporte de las culturas aborígenes.
Fig. 8. Primer Escudo de Armas de la República de Venezuela. 1830.
Archivo General de la Nación.

Pero la composición social de los ejércitos que luchaban en ambos bandos


durante los conflictos independentistas latinoamericanos variaba
considerablemente. Si bien es cierto que del lado de los patriotas se contaba
con una abrumadora mayoría de criollos de todas las mezclas, etnias y clases,
no es menos verdadero que bajo las banderas del Rey de España luchaba una
parte nada despreciable de hombres nacidos en América. No obstante y por
regla general, aunque con excepciones notables, los altos mandos patriotas
estaban integrados por blancos criollos descendientes de europeos. En las
tropas y comandos en ambos bandos en lucha, el pan de cada día eran la
desconfianza, las traiciones y felonías y es también conveniente no olvidar a
los criollos y a los mestizos que se unieron a los bandos realistas. Es emblemático el
caso de los ejércitos de llaneros venezolanos al mando de José Tomás Boves 23,
el temido caudillo asturiano que asolaba las plazas patriotas durante la
independencia de Venezuela y a quien se le atribuyen casi trescientas mil
muertes entre 1812 y 1814, ese terrible período conocido en Venezuela
como la Guerra a muerte. También está el caso de los mapuches chilenos entre
1818 y 1824 y el de los llamados pastusos en la Nueva Granada.

En cuanto a las guerras de castas que se produjeron, notablemente en América


Central, aún la Revolución Mexicana de comienzos del siglo XX puede
considerase como una manifestación del odio secular de los mestizos e indios
contra los blancos criollos y extranjeros que los habían explotado desde siempre
y que representaban un enemigo mucho más concreto y real que una lejana
monarquía madrileña, un usurpador francés del trono español o un emperador
delegado sentado en un trono americano. No cabe duda de que los mestizos
americanos que resultaron de las mezclas que produjeron los procesos de
conquista e hispanización de América así como los morenos descendientes
de esclavos africanos, consideraban “males menores” al Rey Fernando VII,
Napoleón Bonaparte o Napoleón III si los comparaban con los blancos
criollos en funciones de gobierno, tanto durante el período provincial como
durante el republicano, pues éstos les habían ocasionado indecibles
sufrimientos como resultado de una explotación sin cuartel, primero en
nombre de España y luego en el contexto de los procesos de independencia,
cuando ya los blancos criollos ni siquiera estaban sujetos a los controles del
gobierno metropolitano, ni los indios y mestizos se beneficiaban de la
protección, real o ilusoria, de la corona de España. También como una
manifestación de enfrentamiento entre clases puede considerarse la Guerra
Federal que se desarrolló en Venezuela entre los años de 1859 y hasta 1863.
Fig. 9 Ciudadano General Ezequiel Zamora (1817-1860)

Fig.10. Estampilla de correos de Bolivia. 1987

Si es bien cierto que una vez lograda la independencia de España en muchas


de las nueva repúblicas latinoamericanas se suprimió la servidumbre de los
indígenas y se proclamó hasta la saciedad la igualdad de los indios, mestizos
y morenos con los blancos en materia de derechos, y que esas proclamas
estaban inspiradas en los más avanzados regímenes legales europeos y que
también se reconocieron a muchos mestizos sus invalorables contribuciones
militares y civiles a la causa de la independencia, y que se llegó incluso a
abolir las denominaciones peyorativas de las castas que expresaban los
diversos entrecruzamientos étnicos desarrolladas y usadas por los blancos
criollos en su trato con los indígenas, mestizos y morenos descendientes de
africanos 24, es perfectamente comprensible darse cuenta de las razones por
las que esos grupos recibían las manifestaciones de igualitarismo con una
fuerte dosis de un arraigado escepticismo aprendido a lo largo de una
historia plena de traiciones y mentiras. Es así como la desconfianza y el
escepticismo pasarían entonces a ser rasgos diferenciales y casi que
constitutivos de las culturas latinoamericanas postindependentistas: Leyes de
Indias, Leyes de Burgos y Nuevas Leyes de Indias primero, seguidas de las
medidas instauradas por el reformismo borbónico 25 y que, supuestamente,
emanaban de una buena voluntad hacia los indios, mestizos y morenos por parte de
los criollos del periodo provincial y por los patriotas republicanos durante y
luego de las guerras de independencia, fueron todas desvirtuadas luego
durante el periodo republicano para dar paso a nuevas formas de
explotación y servidumbre, lo que resultó en resentimientos que perviven en
la profundidad de la psique colectiva latinoamericana hasta el presente.
Desprovistos por los procesos de independencia de la precaria o ilusoria
protección de la corona española a los indios y mestizos, se intensificó
entonces la tiranía de las aristocracias blancas criollas y se instaló un periodo
de hegemonía de los bancos criollos conocido como patriciado criollo o período de
las oligarquías conservadoras 26.
Fig. 11. Fernández, Carmelo. El Congreso de Valencia, 1843. Lápiz sobre papel.
Colección Fundación John Boulton, Caracas
Fig. 12. Fernández, Carmelo. Notables de la Capital, 1850. Acuarela,
Colección Biblioteca Nacional, Bogotá.

Dueñas ahora de pleno derecho de los territorios americanos y sus gentes,


las clases dominantes criollas retomaron con mayor vigor aún la explotación de
las poblaciones que les servían como esclavos o criados. Ello ocasionaría
numerosas revueltas y rebeliones en Bolivia, Guatemala, México así como en
otros puntos del continente. 27 Ya para la segunda mitad del siglo diecinueve,
comienzan a insurgir contra a hegemonía de los oligarcas 28 criollos en el poder
los intelectuales nativistas o indigenistas que, junto a los que apoyaban las
ideologías de contenido reivindicativo se aglutinaban en movimientos
sociales incipientes que cuestionaban los modelos de desarrollo capitalista
que se imponían en Latinoamérica. Es entonces cuando se comienzan a
conceptualizar de forma incipiente la dependencia, el neocolonialismo y la
pobreza en América Latina, vistos como resultado de procesos políticos,
económicos y socioculturales hegemónicos inspirados en modelos europeos
y norteamericanos de desarrollo capitalista 29, que forzaban a los
latinoamericanos a implementar modos de vida que significaban un
elevadísimo costos social. Es así como los primeros intentos de
industrialización en América Latina dieron como resultado los primeros
sindicatos y las primeras luchas del movimiento obrero organizado en todo
el continente.

Es conveniente recordar también que en la historia de la cultura, los


nacionalismos latinoamericanos son también, paradójicamente, producto de
visiones modernizadoras, que trataban de introducir componentes sociales
de reivindicación de lo autóctono junto a desvalorizaciones de lo extranjero,
rasgos éstos que estarán presentes como dicotomías contradictorias en las
culturas y en las artes de la América Latina y que las clases políticas
hegemónicas en todo el continente utilizarán de manera demagógica y poco
consistente.
Fig. 13. Fernández, Carmelo. Mujeres blancas, 1850. Acuarela,
Colección Biblioteca Nacional, Bogotá
Fig. 14. Fernández, Carmelo. Indios mestizos cosecheros de anís de la provincia de Ocaña. 1850. Acuarela.
Colección Biblioteca Nacional, Bogotá

Desde los valores de lo europeo puro con su descendencia acriollada hasta los de
lo indígena puro con su descendencia mezclada con el blanco europeo y/o con
el negro, es posible construir una escala de los diversos grados de
intolerancia, expresada en las denominaciones de las castas de uso corriente
en el léxico de las sociedades provinciales y republicanas latinoamericanas
hasta bien entrado el siglo veinte. Esas denominaciones de castas van desde
la intolerancia blanca pura en un extremo para llegar, luego de diversas
gradaciones, a los extremos opuestos de lo africano puro y lo indígena puro. Las
denominaciones incorporaban en diversa medida los rasgos y valores de las
culturas de origen de los distintos grupos de población, concebidas estas
como culturas puras y originales. Estos rasgos, supuestamente puros, se
fusionaban de diversas maneras, en diferentes cantidades, con los rasgos y
valores de las diferentes hibridaciones que ya habían resultado de previos
procesos de mestizaje étnico e hibridación cultural. Es posible ver así cómo
los valores criollos, independientemente de sus orígenes blanco-europeos,
indígenas o africanos, pueden llegar a encontrarse en diversos puntos de
esas virtuales escalas, para luego producir trayectorias divergentes y
ramificaciones de los diversos tipos de intolerancia presentes hasta hoy en
las culturas latinoamericanas. No se dificulta entonces la percepción de las
maneras en las que se han profundizando las diferencias culturales entre grupos,
clases, etnias y castas en América Latina, para llegar a configurar el complejo
mapa de hibridación cultural latinoamericana de hoy en día, el cual se ha
complejizado considerablemente.

Fig. 15. Debret, Jean Baptiste. Familia de un jefe camacán preparándose para una fiesta. Acuarela sobre papel,
ca.1820-30, Colección MEA, Brasil.
Fig. 16. Debret; Jean Baptiste. Una cena brasileña. 1827, Acuarela sobre papel, 15,9 x 21, 9.
Colección MEA, Brasil.

Los estudios 30 de las combinaciones y recombinaciones de las raíces


culturales aborígenes, africanas, cosmopolitas europeas y norteamericanas
presentes en la composición de las culturas de Latinoamérica, no pueden dar
entonces como resultado más que modelos muy diversos e incluso
divergentes de hibridación cultural, dada la complejidad y diversidad de los
procesos históricos y sociales que han generado las culturas de las diferentes
formaciones sociohistóricas en América Latina. Es justamente esa hibridación
la que ha sido tenida como rasgo esencial de lo latinoamericano aún a pesar de
que ya no quede prácticamente nada sin modificación en las llamadas culturas
de origen 31 ni de que ninguna de las mismas pueda considerarse en el presente
como pura en ningún sentido.

No obstante, lo que sí parece persistir aún es la intolerancia por parte de


quines postulan la existencia de una Cultura considerada como única, la
propia, la de quien emite el discurso o genera el texto cultural, y que intenta
afirmar su superioridad frente a otras culturas casi siempre percibidas como
amenazantes o inferiores por la Cultura dominante, es decir la de la clase
dominante 32 en cualquiera de las formaciones sociohistóricas de la América
Latina. Seguimos viviendo entonces en Latinoamérica en el contexto de
polarizaciones culturales y en medio de las tensiones producidas por la
pretensión hegemónica de una Cultura, de la que son portadoras las elites
dominantes y las de las otras culturas, pretendidamente originarias, o tenidas
como tales por cada uno de los innumerables grupos aborígenes o mestizos
que pueblan el subcontinente.

Fig. 17. Boggiani, Guido. Muchacha caduveo con el cuerpo pintado, ca. 1897.
Pero todavía en los comienzos del siglo veintiuno, de las estratificaciones
culturales existentes en Latinoamérica permaneces excluidos grandes
sectores de población que siguen estando marginados y sin posibilidad de
realizar intercambios culturales significativos. No hay más que revisar los
modelos e ideales, por ejemplo, de belleza femenina preferidos entre las
comunidades criollas, blancas o mestizas, así como los modelos e ideales de
los estilos de vida, para darse cuenta de lo insignificantes que han resultado
los esfuerzos de las manifestaciones culturales criollas o mestizas en el marco del
avasallador proceso de homogenización cultural y de estandarización de los
gustos, signos, símbolos, lenguajes y códigos que cada día intentan reducir la
compleja y vasta diversidad cultural de América Latina. Pero, a pesar de ello,
en la llamada cultura latinoamericana ─ o sea, el conjunto de las diversas
culturas de los pueblos latinoamericanos ─ se han ido recombinando y
organizando históricamente zonas culturales según diversos modelos de
hibridación, caracterizados por mezclas diversas de componentes que
colaboran para mantener una ilusión de diferencias y de especificidades nacionales
aunque las mismas sean cultural y estéticamente cada vez menos
significativas. Muestra de ello serían muchas de las actuales culturas
urbanas, configuradas en los grandes centros urbanos en las capitales de los
diversos países latinoamericanos, por parte de quienes aspiran a definir
identidades propias y a mantener una ilusión de particularidad que, al ser
revisada con cierta profundidad permite ver constantes homogeneizadoras
en sus componentes estructurales actuales.

El criollismo renovado que hizo su aparición en Latinoamérica durante las


primeras décadas del siglo veinte y que se entrecruza con las corrientes
modernizadoras en las artes visuales de ese mismo período, produce
expresiones artísticas de importancia en las décadas de los veinte, treinta,
cuarenta y cincuenta. Como programa político, cultural y artístico este
movimiento es también resultado de una hibridación que aparecerá en las
artes visuales a través de idiomas plásticos e imágenes que pueden confundir
por una aparente similitud, en representaciones que emergen de
convicciones profundamente arraigadas en la subjetividad de aquellos
artistas que han buscado en las iconografías que incorporan mitos,
ideologías, cultos y narrativas épicas nacionales y autóctonas de diverso
origen. Pero hay que recordar que no son sólo los indios, mestizos y
morenos los que hibridizan su cultura, sino también los blancos dominantes
que se pretenden, cada día, bien sea más cosmopolitas o globalizados o
también más integrados a procesos sociales reinvidicativos en sus respectivos
países y culturas nacionales.

Las culturas dominantes, tradicionales, conservadoras y generalmente de un


anacrónico cosmopolitismo son también, durante la primera mitad del siglo
veinte latinoamericano, objeto de revisiones críticas que proponen
transformaciones conceptuales profundas, a través de intentos
programáticos que aspiran vestir ─ enmascarar ─ los lenguajes y las formas
de expresión artística de los mestizos, antes indios o esclavos, con los
ropajes de los discursos de sus anteriores amos y viceversa. Muchos
intelectuales y artistas latinoamericanos a pesar de que no formaban parte, o
no estaban vinculados a las élites blancas o el patriciado criollo, pasan
también entonces, en la primera mitad del siglo veinte, a tener en muchos
casos como referentes de sus obras a las artes de las culturas cosmopolitas
de sus antiguos amos, clase a la que estos artistas supuestamente desafían con
sus propias armas estéticas, pero son también numerosos los artistas llegan a
romper con esas referencias para acceder a temas, códigos y representaciones
consideradas como tabú por las culturas blancas dominantes. Muchos de
estos últimos emprenden entonces procesos de ruptura con el
cosmopolitismo cultural para dar cabida en sus obras a contenidos y formas
procedentes de procesos de la implantación de nuevas ideologías que, a su vez,
son resultado de las diversas iniciativas de modernización y democratización
llegadas a América Latina de la mano de nacionalismos filosóficos y
políticos de principios de este siglo. Se configura entonces,
fundamentalmente en los años que transcurren entre las décadas de los
veinte y los sesenta del siglo veinte latinoamericano, todo un repertorio de
códigos artísticos que pasan a operar como recursos en los lenguajes
plásticos en las artes tipificadas como modernas y contemporáneas que surgen en
el contexto de las culturas de la modernidad y la contemporaneidad en las
diversas formaciones sociohistóricas latinoamericanas 33.

Fig. 18. María Félix en “Enamorada” de Emilio Fernández.


Fotografía de Gabriel Figueroa. México, 1946
Fig. 19. Torres García, Joaquín. Paisaje de ciudad, 1918. Óleo sobre cartón, 36 x 56 cm.
Colección Museo Nacional de Artes Visuales, Montevideo.

Fig. 20. Figari, Pedro. Pericón en el patio de la estancia, ca. 1923, Óleo sobre cartón, 70 x 100 cm.
Colección Museo Nacional de Artes Visuales, Montevideo.
Es durante este período de la historia de las artes visuales de la América
Latina cuando podemos observar tratamientos explícitos no sólo de temas
relevantes de la vida social en los países de los creadores, sino también
contenidos y signos que remiten a diversas hibridaciones no-americanas,
expresados mediante tratamientos plásticos que aspiran a la modernidad a
través de la incorporación de elementos procedentes de los lenguajes de las
llamadas vanguardias artísticas del siglo veinte europeo y ruso.

Esto no es difícil de comprender, pues en muchos de los ambientes


artísticos y culturales latinoamericanos del período se pensaba que el
componente cosmopolita, tradicional y conservador, que había contribuido
al desarrollo de los lenguajes plásticos del siglo diecinueve había sido
alejado casi definitivamente, y que ahora, a comienzos del veinte, al
producirse nuevas valorizaciones del arte europeo de la modernidad y la
ruptura en las que se incorporaba la presencia de las representaciones de los
nacionalismos europeos, se producían una revisión y nueva conceptualización de
lo criollo como expresión de lo nacional y lo autóctono. Esto sucedía incluso
en las sociedades y culturas donde la presencia aborigen había sido no sólo
casi totalmente exterminada, sino que lo que había sobrevivido de dichas
culturas estaba prácticamente sometido al ostracismo y a la descalificación
de la crítica erudita y cosmopolita. Pero, justamente desde su condición de
cultura reprimida y por esa misma condición, ciertos contenidos y formas
ejercían notable presión estética sobre los artistas. Estos contenidos
culturales y artísticos reprimidos continuaban pujando por establecer una
presencia ya no soterrada y acuciante, sino una que pronto emergería en la
obra de artistas plásticos de gran vitalidad, a mediados del siglo veinte y en
prácticamente todo el subcontinente.

Una notable ausencia de autoanálisis en las artes visuales de Latinoamérica


permite constatar la vasta dimensión del vacío al que muchos artistas,
intelectuales, historiadores y críticos de arte de las últimas décadas han
dejado sin atención, salvo en casos notables de miradas curiosas e
insistentes 34 y de creaciones que hasta hoy nos llenan de estupor maravillado.
Una ulterior realidad artística, altamente individualizada y específica,
resultará no obstante una manifiesta debilidad e indefinición de procesos
críticos y de estudio rigurosos, de una ausencia políticas públicas para el
fortalecimiento de las culturas y las artes en muchos países
latinoamericanos, así como de un atraso técnico relativo de las instituciones
que debían atender los campos de las artes y la cultura 35 ─
fundamentalmente en los ámbitos de la formación para la investigación, la
crítica y la historia del arte ─ lo que permitió que durante los periodos
llamados de modernización en Latinoamérica se enmascarara lo autóctono
bajo los valores folk, dando así, muchas veces, muestra de la gran
superficialidad con que se tranquilizaban las conciencias de muchos
intelectuales, artistas y políticos que se sentían elegidos para proponer en
los países latinoamericanos nuevas ideologías democráticas y nacionalistas 36. Serán
esos sectores intelectuales y políticos los que al asumir, a mediados del siglo
veinte la responsabilidad de estimular y promover iniciativas de reflexión
sobre los procesos artísticos y culturales en América Latina, conducirían a
la fijación de más de un estereotipo cultural vinculado a ideologías
supuestamente democráticas que trataban de imponer en el contexto de la
Guerra Fría su hegemonía política en América Latina 37.
Fig. 21. Gil de Castro, José. Retrato de Simón Bolívar, 1825. Óleo sobre tela.
Colección Asamblea Nacional, Caracas.
Fig. 22. Gil de Castro, José. Retrato de Simón Bolívar, ca. 1823-24. Óleo sobre tela.
Colección Particular. Lima.

Fig. 23. Espinoza, José María. Simón Bolívar. 1828. Lápiz sobre papel.
Bogotá
Hoy en día, una revisión del criollismo como categoría sociopolítica, artística
y estética, debería llevarnos a una autocrítica más profunda. La crítica severa
del criollismo ha tenido representantes ilustres desde Simón Bolívar 38 pero
pareciera que el tiempo no transcurre en la historia de la cultura y las artes
latinoamericanas y que permaneciéramos, aún hoy, entre dos mundos en
pugna: por una parte el de las apologías de un arcaísmo autóctono y por otra la
de un Occidente cosmopolita y modernizante, propuesto hoy como globalización,
cuyos embajadores creen poseer las claves de la superioridad estética
absoluta. Vemos entonces cómo se suceden las generaciones
latinoamericanas de artistas y constatar que sobreviven en eterna
coexistencia los mismos grupos-tipo, con las mismas posiciones y roles,
postulando nuevos ropajes para los mismos valores y modelos críticos, en
una casi permanente e invariable estructura de tendencias y posturas
artísticas que continúan ejerciendo su hegemonía bajo diversas formas. Es
doloroso ver que hoy esa clase intelectual y política que se pretende aún
hegemónica sigue sosteniendo y promoviendo sin variación valores, rasgos y
pulsiones estéticas consideradas como de mayor jerarquía que las otras, las de
los demás, y esto ha sucedido de manera constante a lo largo de sucesivas
etapas históricas. Es así como se ofrecen sin mayor indagación, discursos
“críticos” sobre imágenes y representaciones de una supuesta visualidad
latinoamericana que se supone original y propia, por parte de quienes
enmascaran y disfrazan de racionalidad, modernidad y civilización posturas
radicalmente conservadoras y a aún racistas en materia artística. Se nos
ofrecen entonces discursos supuestamente críticos que se valen de los
aportes formales de los discursos de la crítica contemporánea de las artes,
que proponen como tradicionales, nacionales, puras, autóctonas manifestaciones
estéticas que son incluso concebidas y propuestas como verdaderas, y que no
son otra cosa que retardados ejercicios de mimesis derivados de las artes
cosmopolitas europeas y norteamericanas. Entre ambos extremos y ambos
mundos de imágenes y visualidades es posible ver que hay miríadas de
enclaves o nichos artísticos así como de artistas que proponen distintas
hibridaciones artísticas, más allá de los rostros y máscaras de los mundos puros o
de los estereotipos del mestizaje artístico. Trátese de los que proponen
ficciones de contemporaneidad o de los que se postulan como los representantes
de las ficciones de lo prístino originario, están los que pretenden y han
pretendido siempre desbarbarizar y civilizar al otro, mientras que ese otro
pretende resguardar a toda costa lo que atesora como verdadero, valioso y
autóctono, en suma, lo originario puro. Es en este contexto que las minorías
modernizantes y democráticas de mediados del siglo veinte artístico
latinoamericano asumen un criollismo renovado como programa de ensayo, para
operar como disfraz y simulacro a efectos de integrar y civilizar a las culturas
bárbaras mediante un proceso de reconversión cultural destinado a inscribir las
culturas y las artes latinoamericanas en el contexto mundial a través de la lo
que en las ciencias sociales del funcionalismo de mediados siglo veinte
norteamericano concebía como modernización y democratización de los gustos y
las prácticas artísticas en el contexto de la posguerra y la Guerra Fría.

El criollismo renovado del siglo veinte latinoamericano se vale entonces, una


vez mas, de las representaciones y la iconografía de las masas mestizas así
como de sus mitos heroicos, tales como los que se condensan en la figuras
del jinete-caudillo: el llanero venezolano, gaucho argentino, charro mexicano o en la
figura múltiple y polisémica de la hembra-virgen-madre-prostituta para producir
los torrentes de imágenes que inundaron la cultura de masas del siglo veinte,
primero en las pantallas del cine “latinoamericano” ─ argentino y mexicano
pero también el de Hollywood ─ de los años cuarenta y luego en las
radionovelas inspiradas en el comic para adultos 39 que pasarían después a la
telenovela latinoamericana de los cincuenta y sesenta. Muchos de esos tipos
criollos que protagonizaron la cultura de masas latinoamericana de la segunda
mitad del siglo veinte sería reivindicados desde y con los códigos artísticos
de un otro que ya histórica y socialmente estaba perdido para siempre, pero
que no obstante parecía haberse conservado en estado de hibernación para
retornar en formas, retóricas y códigos de los que ahora se apropiaban
quienes secularmente habían negado valor a las fuentes que los generaron y
continuaban negando al miméticamente apropiarse de ellos a mediados del
siglo veinte.

Es aquí donde las relaciones entre modernización e inserción en mercados


culturales más amplios obligarán a quienes promueven, coleccionan, producen
y difunden, venden o compran, investigan o hacen historia de artes visuales
y de la imagen en general, a reformular conceptos, formatos, lenguajes,
lecturas, soportes y, sobre todo, programas. Será entonces a través de
diversas operaciones de apropiación que la nueva industria cultural
latinoamericana de mediados del siglo veinte llegará a producir y distribuir la
inmensa cantidad de repertorios de signos, códigos y retóricas que le
permitieron crear iconografías, discursos y narrativas susceptibles de ser
utilizadas con propósitos instrumentales y como emblemas en las luchas por
la hegemonía cultural llevadas a cabo por las nuevas élites democráticas de la
posguerra y la Guerra Fría, que expresaban la férrea voluntad del patriciado
criollo de incorporarse definitivamente a la modernidad y a los mercados
mundiales de intercambios culturales. Solo que ahora el trabajo sucio de la
política había sido delegado en nuevos mercenarios de las élites criollas para
hacer efectiva su voluntad de no rendirse nunca y no perder terreno ni
poder aún ante nuevas y más fuertes presiones sociales. Es entonces cuando
esas nuevas elites criollas modernizadas realizan nuevas apropiaciones culturales y
artísticas, mediante el mecenazgo a artistas dispuestos a realizar nuevas
recodificaciones, transcodificaciones y reacomodos de elementos y valores artísticos,
ajustados y acondicionados a los nuevos programas político-económicos
vestidos ahora con ropajes democráticos como resultado de las exigencias,
tensiones y relaciones internacionales producto de la Guerra Fría y de la
ideología del panamericanismo 40.

Hemos visto como ya para los inicios de los movimientos independentistas


de la América hispanizada existían grandes diferencias culturales y
resentimientos entre clases sociales y pueblos, así como sentimientos
anticosmopolitas profundos, que se habían depositado en el seno de las
clases ubicadas en los estratos inferiores de las sociedades latinoamericanas.
No obstante la distancia cultural que durante siglos separó a los
comerciantes criollos (a los indianos como se les denominaba en España) de
sus socios metropolitanos, los vínculos de clase serían reconstruidos luego
de las guerras de independencia en el periodo republicano y así se
fortalecerían aún más las redes de vínculos económicos, culturales y
artísticos de América Latina con el Viejo Mundo, pero ahora la hegemonía
cultural de Estados Unidos, el gran vencedor de la Segunda Guerra mundial,
se hacía sentir con mucha más fuerza en el Caribe y Latinoamérica en la
segunda mitad del siglo XX. Ahora los esquemas de relaciones se
modificarían y la hegemonía norteamericana en el mundo de la Guerra Fría
superaría el alcance de las influencias europeas en la Cultura hegemónica
dominante en América Latina.

Fig. 24. Lovera, Juan. Firma del Acta de la Independencia el 5 de julio de 1811. 1838, Óleo sobre tela.

Colección Museo Caracas, Caracas.


La historia cultural y artística de América Latina está hecha entonces de una
acumulación de diferencias profundas, primero con Europa y luego con los
Estados Unidos y esto ha sido así aun para las élites que se han pretendido
cosmopolitas. Esas diferencias reventaron primero en ese gran cisma cultural
que fueron las guerras de independencia en la América hispanizada y que
tuvieron como consecuencia cultural complejos procesos de
desprendimiento de los centros europeos de poder cultural y que
contribuyeron a abrir en Latinoamérica una brecha de sentimientos de
repudio generalizado a la cultura española ─ europea y cosmopolita, en
general ─ por parte de sectores importantes de una intelectualidad criolla de
muchos países latinoamericanos 41 que se pretendía americana por encima de
todo. Tras las revoluciones independentistas, algunos de los blancos criollos
pasaron a reivindicar actitudes y mentalidades postuladas por numerosos
mestizos y morenos y los resentimientos y heridas culturales llegarían a
profundizarse hasta límites de mutua intolerancia entre clases con opuestas
visiones del mundo, debido a las secuelas de una dominación cultural y
política excluyente y despiadada no sólo por parte de los españoles
metropolitanos, sino sobre todo por parte de las élites de los blancos criollos
republicanos que pasaron a ser los dueños de América.

Un importante componente de las culturas republicanas de la América Latina


de la segunda mitad del siglo XIX y aún en los inicios del XX, fue entonces
el resentimiento. La reconstrucción intelectual y cultural de la América
postindependentista, el papel del odio antiespañol ─ y antiextranjero, en
general ─ no ha sido visto sino benévolamente. Este sentimiento había
venido recorriendo desde los inicios de los procesos de conquista extensas
regiones del subcontinente latinoamericano y aumentó y se consolidó con
los procesos de independencia, lo que haría muy difícil su posterior
erradicación por parte de quienes habían sido los primeros en promoverlo y
utilizarlo como motivación para la guerra. Ese sentimiento antiespañol, que
sin duda es uno de los factores que estuvo en la base de las rebeliones
independentistas, pasó luego a formar parte del conjunto de rasgos
distintivos compartidos por los latinoamericanos blancos, morenos y
mestizos y se encontrará presente en las diversas configuraciones culturales
denominadas americanistas, indigenistas y criolllistas. Ese mismo sentimiento
pasará también por diversos períodos y ciclos de adormecimiento y
recrudecimiento y es así como lo veremos aparecer y desparecer para
nuevamente resurgir en la dinámica cultural de América Latina, desde el Río
Grande hasta la Patagonia, en sus diversas manifestaciones, durante todo el
siglo veinte, aunque sus manifestaciones no hayan dejado de estar presentes
como fenómeno localizado en los estamentos más bajos de las sociedades
locales a lo largo de la historia cultural latinoamericana. Es este uno de los
componentes culturales que pasan a ser rasgos susceptibles de definirse como
típicos de las culturas latinoamericanas. Para fines del siglo diecinueve,
comienza a percibirse como algo unitario y característico de ese conjunto
cultural complejo denominado Latinoamérica y con un cambio en su objeto
y contenido se verá reforzado por las ideologías democráticas modernas de
la segunda mitad del siglo veinte, tales como el panamericanismo 42 (en sentido
de postular que lo español era medieval, caduco y superado por la historia) y
su contraparte el indoamericanismo que postulaba la oposición a la nordomanía,
como lo expresara José Enrique Rodó 43. El sentimiento antiespañol se verá
sustituido entonces por el sentimiento antinorteamericano en el esquema de
relaciones culturales que resulta del triunfo de los Estados Unidos en la
Segunda Guerra mundial y ocupará con facilidad el mismo nicho de
sentimiento antiextranjero construido desde varios siglos antes.

Pareciera, entonces, que Latinoamérica se entiende y percibe a sí misma


como diversa, a la vez que se define como unidad plural demarcada y dividida
al mismo tiempo por fronteras culturales que en un principio van a
corresponder forzadamente con las fronteras entre lo metropolitano europeo y lo
americano, para luego deslindar lo norteamericano de lo latinoamericano. Estos
deslindes luego serán sustituidos efectivamente por las fronteras políticas
nacionales, que más tarde se desdibujarán culturalmente en un complejo mapa
aún por cartografiar, lleno de hibridaciones y mezclas que a inicios del siglo
veintiuno aún resulta harto dificultoso esbozar.
N OTAS Y R EFER ENC IA S

1 Una et imología sugiere que c r i ol l o derivaría de c r í o q u e e s c om o l o s e s p a ñ o le s s e


re fer ía n a su s hijos. Otr as fue nte s lo hace n derivar de l port ugué s crioulo usado para
d is ti ng ui r a l o s e scl a vo s n ac id os e n A mér ica de l o s nac id os e n Á fr ica. La may or ía de
l o s f i l ó l og os c o in c id e n e n q u e e s u na d e r iv a c ió n d e l ver b o cri a r y que t ie ne la mi sma
r aíz qu e la p a la br a cria do usad a pa ra re fer ir se a los sirvie nte s y esc l avos . Cria r, de l
l a t í n c re a re o e n ge nd r a r, tie ne la m isma ra í z que c re a r. Par a J osé Le zama L im a, la v o z
viene del port ugué s, de “e l que es cr iad o e n casa” o c r ia d ou ro . Se gú n la in vest ig ado ra
y es tud io sa de Le zam a, I r lema r C hia mp i, Lezama emplea el vocablo par a refer ir se a
l a f o r m a c i ón d e l os len g u a j e s nac i o n a l es e n e l s i glo X IX y lue go ex pa nde su
s i gn i fic ad o a lo “ amer ica n o” p o stul a nd o la u ni dad de l a A mér ica hi sp a n izada y a
e fect os de su br ayar s us d ife renc i as c on e l mu nd o pe n in su la r. Ver: LEZ AM A L I MA ,
J O SE. La e x p r e s ió n a me r i ca n a. F C E , Méx ic o 1 99 3, p p . 13 3 - 1 55.

2 U na l engua criolla, t amb ié n l la mada cre ole o pat ois, es una l e ngu a nac id a hab i tua lm ent e
e n u na co mu n idad de ge nte s c o n or íge ne s d i ver so s que no c omp arte n p re v iame nte
n i n gu na le ng ua, que t ien en nec es idad de c omun i car se y se v e n f or zad os a va ler se de
u n id i oma que no es e l de n i ngu n o de e ll o s. E l re su lt ado es u na le ng ua q ue t om a e l
l é x ic o (cas i s ie mpr e m uy d e f orm ado ) d e l a l eng ua imp ues ta y que sin embargo tiene una
s i nt ax is qu e se p arece m ás a la de o tr as le ngua s au tóc to na s que a la de la le ngu a
" madre ". El e jem plo t ípico e s e l de los esc lavos lle v ados a las plantac i ones de l
C a r i be desde d ife rentes par tes de l mu nd o, que se vier on o b lig ado s a u t ilizar la len gu a
de la potenc ia c o lonial, ya fuera e l inglés o e l ca ste l la no , p ara c omun i car se. Esta
c om u n ic a c i ón p r o g r e s i vam e nte t om a l a f or m a d e u n p id g i n p a r a lue g o t r a ns f orm a s e e n
l a le ngu a n a t i va y , a l c a b o d e v ar ia s ge ner ac io ne s , se ha b la un a le ngua crioll a. E l p id gi n
n o e s h a bi t u a lm e nte e l d i a le c t o m a t e r n o d e n ingú n g r u p o é t n i c o o s oc ia l ; s u e le s e r e l
q ue e mp le a u n inm i gra nte de pr imera g ene rac i ón e n su nue vo l ugar de re side nc ia , o
u na l i ng u a f ranc a e m p le a d a e n u n a zo na d e c on t a c t o i nt e n s o d e p o b la c i one s
l i n gü íst ic ame nte d i feren c iada s, c om o u n puert o m uy act i v o; lo s p id g i ns f ue r on
frecue nte s tambié n e n las c o l on i as, m e zc la ndo e leme nt os de l a le ngu a de l a nac i ó n
d om in an te co n l o s de l os n at i v os y l o s e sc la v os i n tr odu cid os e n e l la. E l p i dg i n má s
ant iguo de l que se tie ne not ic ia es la l i ng ua f ranc a o s ab i r, un d ialec to emplead o por
l o s ma rinos y merc aderes de l Mediterráneo de sde ante s del s i gl o X IV, que c ont inuó
e n u s o has ta f in a les de l sig l o X IX.

3 S o br e la nece sid ad de co l oc ar al Bra s il j u nt o a lo s d emá s paí se s de H is pa n oamé ri ca:

D ic e J orge S c h wa rt z e n “Va ng uard ia y c osmopolitismo en la déc ada del Veinte”,


p u b lic a d a e n c a s t e l la no e n 1 9 93 p or B e a t r i z V it e r b o ( R o s a r i o) : Pe ro mi gran sat i sfacción
f ue h abe r p ue s to a B r as il l a do a l a do c on H is pa no a mé r i ca, h a ce r una e s pe c ie de p ue n te. Y a l o
h a b ía h e ch o e n ' Va n g ua rd ia y co s m op ol iti s m o e n la década del Ve inte', (1) que fue mi tes is de
d o ct o ra do, a ce r c a nd o a l a ge ne r a ci ó n ma rt i nf ie r r is ta a rg e nt i na c o n l a g e nte de l a s e ma n a de l 22
e n S a n P a b l o . E n a q uel m o m e nt o, m u cha d e l a d oc um e nt a c i ó n q ue r e u n í q ue d ó a f u e ra, y s e n t í
que real me nte falt ab a un pa nora ma cont ine nt al. S e h abl a ta nt o de A mé rica l at i na p e ro B ras il
q u e d a e x c l u i do de l os p a no ra m as l at i n oame r i ca n os. Y o c r e o q ue h oy e s ta m os m ás ce r ca q ue a nte s ,
p o r l o me no s e n e l M e rcos ur. S i n d ud a h a y u n bo o m d e l cas t e l l a n o e n e l B ra s il, y v e o a q u í u n
inte rés por el port ugués.

4 E l na c io na l i s m o es u na d octr i na o f i l os of í a po l í ti ca que p r op ug na co m o v al ore s


f und ame nta le s e l bi ene star , la p res er vac i ón de l o s r asg o s iden t ita ri o s, la
i n depe nde nci a e n t odo s lo s órde nes y l a g l or ia, de l a pr op i a n a c i ó n. E l na ci o nal is mo e s
u n c o nce pt o d e i d e nt id a d e x p e r im e nt a d o co le ct ivame nt e p or miem br os de un g o b ie r n o,
n a c i ón , s oc ie d ad o t e rri t or i o p a r t i c u la r . L o s na cio nal ist as se esfuer zan e n cre ar o
s ust ent ar u na na ció n bas ad os e n var ia s noc io nes d e l e g it im a c i ó n p o l ít ica. Mu ch as
i d e ol og í a s n a ci o n a l ist a s derivan de la te oría r om ánt ic a de la id e nt i dad cult ural, mi en tra s
q ue otr os se ba sa n en e l a r g um e nt o l ib e ral de que la le gitimidad p o lí tica d er iv a de l
c on se ns o de l a p o b l a c ión d e u na r e g i ó n. E l na c io n a li s m o c om o ide ol og ía e s po r t a d or
d e un a i nt e ns a c arg a d e u na f a l s a c o nc i e n ci a , a t ravés de la cual, al pre tender tr asce nder
l a s i t u a c i ó n r e a l d e d om in a d o o d e d o m in a n te, se prete nde la r ea l izac ió n de u n ide a l
i l u s or i o c om o p u e d e s e r l i be r a rs e o d om in a r a ú n m á s . L a p le n a i nd e pe nde nc ia d e la s
n ac i one s es h oy e n d ía al g o i mag i nari o y u tó p ic o p u e s l os p a í s e s f u nc i ona n d e ntr o d e
u n s is te ma m u n d ial d e inte r dep e nde n c ia. L o s pe r fi l e s u t ó p ic os o ide o l ógi c os d e lo s
n a c i on al is m os d e r es ist e nc ia o d e d o m i na c i ó n t iene n cad a vez más c aractere s anac rónic os
d e s d e u na per s p e c t i va u n i ve r s a l i s t a y d e i nt e r c on e x ió n g l o ba l. T a m b ién s i n d u d a e s
c iert o que ta l per s pect iva, com o rea l idad h i st óri ca, aú n de ber á s ufr ir muc h os a jus tes
p a r a a f i r m a r s e s i n c r e a r p r ofu nd os de sequ i l ib rio s. Se cae ría e n ex pre si ó n de fa ls a
c on cie nc ia , s i se af ir ma qu e e l pre se nte e s y a un a r adi an te p ers pec ti v a de u n i vers a l
rec onc iliac ión ent re gru pos hum anos pr of und ame nte d ivid id os por ca us as his tóric as
pue s sucede más bie n t od o lo contr ar io, y a que ex iste una potencial g ue r r a c i vi l
m u n d ial e n la ex pre s ión de Ha ns M ag nus En zen s berger . Pe ro cu a nd o se in tent a
c on ve ncer a gru p os o i nd i vid uo s de q ue e l ce ntro de l dr ama cósmic o universal e s el
g r u p o é t n i co - na c i o nal , o é t ni c o - r e l ig i oso, o é t n i c o - c ult ur a l, o cualquier ot ra i d e nt i d a d c ol e ct i va
e n luc ha por recu per ar, de sa rrollar o inve nt ar s u p r o p ia ide n t id a d , pe r d i d a , h a ll a d a ,
mu t il ada o ext ra v iada , e s c o nve n ien te to mar di s ta nc ia y de sco nf i ar y rec ord ar cóm o
e n la s c r is is e ur o pea s d e l os a ño s 2 0 -3 0 d e l s i go X X , l os fa sc ism os y los
t ot al it ar is mo s i ncu lc ar on u na es pe luz n a nte d os i s d e na c io nal ismo a la humanidad.

5 L a n oc i ón de mes t izaj e de sca ns a s ob re la ace ptac i ó n de l co nc ep to de raz a ya hoy


d e s c a r t a d o p o r la b i o log ía y l a g e nét ic a . D e r i va d e me st iz o (de l l a t í n vul g a r m i x t i c i us,
de l l a t í n m ix t us , part ic ipio de m is ce r e, «me zc lar» ) era e l térm i n o ut i l izad o po r l o s
c ie nt íf ic os p o s it i vi sta s p ar a de s ig nar a ind i v iduo s cuy o or ige n est u vie se co mp uesto
de d os razas d ist int as. El térm ino fue emplead o par a refe r irse al mes t izaj e de las razas
europeas y a me r ind i as q u e p o b la ba n e l c o nt i ne n t e a m e r ica n o d e s d e e l n o r t e á r t ic o
h a s t a la Pat ag onia ar ge nt ina y chile n a en el sur. E n otr as re giones y países
p r e v iam e nte b a j o d om in i o c o l on i a l e s p añ o l, p o r t u g u é s o f r a nc é s , va r i a nt e s d e l
t é r m in o t a m b i é n s e e m pe la r o n par a de signar a personas de otras mez cl as ra c ia les e n las
cuales uno er a de ra za i nd íg e na y o tro de u na raza c o lo n ia l e u ro pea . E n la s Filipinas,
e l t é r m in o mestiso, o mistiso, es un a r efere nc ia ge nér ic a qu e d e s ig na a t o do ind ividuo
de asce nde nc ia m ixta, de raza i nd íge na f i li p i na y cua lq ui er o tr a raz a extr anje ra tales
c omo la china, espa ñola o japonesa, etc.

10 L a li tera tu ra so bre Amé r ic a c om o m it o y ut o pí a e s ab und an te . E s d e in teré s re v is ar


tr es gr upos de tr abajos q ue c ue ntan con noto ria s o lvenc ia his tór ic a: La te tra log ía del
e scr it or e h i s tor i ado r m a d r il e ñ o C I R O B AY O : La Colombia da, Los Marañones, Los
C és a res d e la P ata go n i a, y Los Cabal le ros de El D o rad o. En un e nf oque de r ig or
d oc u m e nt a l , l a t r i l og ía d e l h i s t or iad or e s pa ñ o l J UA N G IL , p u bl ic a d a c o n e l no m b r e
ge ner a l de M i t os y u to p ía s de l De sc u br i m i e nt o ( 1 9 89 ). Par a u n e nf oq ue ame r ic an i sta, se
r e c om ie nd a l a t r i l og ía d e l ur ugu ayo FE RN ANDO AÍN SA: L os B us cad o res de la ut op ía
( 1 9 77 ) , Ne ces id ad de l a u to p ía ( 19 9 0) , y De l a E dad de Oro a El D o ra do ( 19 92 ) .

6 C f . J OSÉ V AS C ONC E L OS ( 1 88 2 - 1 9 59 ) e s c r i b ió L a ra z a c ó sm ica, e n Obras


Completas, t . I I , Méx ic o : L i bre r o s Mex ic a n os , 1 95 8 , p. 9 0 3- 94 2 . Va sc once l os, en l a
t e s is c e ntr a l d e s u c i t ad o l i br o, po st ul a que la s d ist i nt as r az a s d e l m u nd o t ie nd e n a
me zc la rse cad a ve z m ás, ha st a form ar u n nue v o t i p o h u m a n o, c om pu e s t o c o n la
sele cción de cad a uno de los pue blos ex iste ntes...E l aut or no prec isó si la mezc la,
i l i m i t a d a e in e vi t a b le, e r a u n he c h o v e nta j os o p a r a l a c u ltu r a o s i, a l c o ntr a r i o, h a b í a
de prod ucir d ecade nc ias cu lt ura le s que a ho r a y a n o s ólo s e r ía n nac i on a le s , s in o
mu nd ia le s. P ro b lem a que r ev i ve la p regu nt a de l mes t izo: « ¿Pu ede com par ar se mi
a p ort a c ió n a l a c u l t u r a c o n la o br a d e l as r a z as r e la t i v am e n t e p u ras q ue ha n hec ho la
h i st or ia h ast a nue str os d ía s, l os gr ieg o s, l os rom an os , l os eu ro pe os ?». Y d en tro de
c a d a pue bl o, ¿ c ó m o s e c om pa r a n l o s per íodos d e m e s t i za je c o n lo s p e r í odo s d e
« h om oge ne idad rac i al cread or a» ? Desd e lo s pr imer os t iem p os de l de scu br im ie nt o y l a
c on qu is ta, fue ro n cas te ll a n os y br itá n ic os, o l at i n os y s aj o nes , par a i nc lu ir po r u n a
p a r t e a l o s po r t u g u e s e s y p o r o t r a a l h o l a nd é s , l os q u e c o nsu m a r o n l a t a r e a d e i n ic iar
u n n u e vo p e r íod o d e la H i s t o r ia c on q u i s t a nd o y p o b la nd o e l he m i s f e r io
rec ie nte mente “de scu b iert o” . Au nque el l os s o lame nte se h aya n se nt id o c o lo n i zad ore s
y t ra s pl a nt ad ores d e su c u ltu r a , l o s l l a m a d os latinos, que se pe rcibía n a s í m i sm os
c omo poseed ores d e ge nio y de arr o jo, se ap ode r a r o n d e la s m e j or e s r e g io ne s, la s que
crey er on m ás r ic as, y los i ng lese s tu v ier o n que c on fo rmar se c on l o que les de ja ban
ge nte s m ás a pt as que e ll o s. Ni Es pa ña n i P ortu ga l perm it ía n que a s us do mi n i os s e
ac erca se e l sa j ó n ni s iqu ier a par a t om ar par te en e l c omerc io . E l p r e d o mini o l at i n o f ue
i n d i scut i b le e n l os c om ie n zo s y p oc o s s os pe c har o n, e n lo s t ie m p os d e l l aud o pa p al
q ue d i v idi ó e l N ue vo Mu nd o e ntre P or tug al y E s p a ñ a , q u e u n o s s iglos m ás ta rde ya
n o s e r í a e l N u e v o Mu nd o po r t u g u é s n i e s pa ñ ol, s in o m á s b i e n i ng lé s e l d om i na nte .
La pu gna entre l at inidad c o ntr a sajonismo si gue sie nd o e n l a actu al idad pu gn a de
i n st it uc io nes , p r o p ós it os e ide a les c a r ac t e r i zada por las secue l as de la luc ha secu lar
e ntre sajone s y l at i n os. E n s u e nsayo s o bre e l p oe ta c ub ano J osé d el C as a l, J orge
Br ioso escr ibe: C i nt i o V i ti e r, e n s u l i b ro L o c u ba n o e n l a p o e s í a, le d a un ca rá cte r
p r o g ra mát i c o a l o q ue s e rí a e l p r oye c to de t od o un g r u po ge ner a c i o nal (l a g e ne ra c i ón de
“ O rí ge ne s”) q u e se c o n ce nt ró a l red ed o r de la re vist a ho mó n i ma y de l a fi g u ra de J os é Leza ma
Lima: la búsqued a de un se nt id o pa ra l o cuba no. Es ta b ús que da s e eje cutó a t ra vés de una
t r a ns f o r ma c ión y u n d e s pl az a m ie n to: del s i n s e nt id o y e l c a os de l a r e al ida d p ol íti c a r e p ubl i ca na
al e nigma y el se cret o de una nación que se re velaba en s us poetas. La poes ía no s ól o inve nt a la
na ción (l a h ist oria de la poes ía cuba na de Leza ma Lima e mpieza con el D ia ri o d e Col ó n ), s i no
q u e s e c on s t ituye e n u na f or m a d e a cc e s o y e nt rada (as il o ) a lo na cional pa ra unos ciudad a nos
s i n r ep úbl i ca . Citamos e ste import ante text o pue s a y ud a a l a c o m pre ns i ón d e l pr oy e c t o
de d ot ar d e s e nt id o a l o a me r ica n o, em pre nd ido s p o r u n os “am e r ic a n o s s in A m é r ica ” ,
e n lo que const ituyó como pr oyect o de mode rnida d ame rica na e n q ue s e in scr i be e l
c r i ol l i s mo e n s us c om ie nz o s a rt íst ic os y l ite rar i os . Se po stu la e nt o nces q ue ta nt o lo
nacional como lo a me r i cano c o nst i tu irí a n h ist orias se cretas que s ó l o l as a r t e s y la po e s ía
ser ían capace s de reve lar.
7 D E HUMBOLDT, ALEJ AND RO. Ensayo P ol ít i co sobre l a Nueva Es paña. Tr aduc id o a l

caste l lano por Don Vicente González Ar na o. Terce ra ed ic ión c orre g ida, a ume ntad a y
ador nada con mapas. París: Librería de Lecointe, 1836, 5 vols .

7 Cf. V AS C ON CEL OS, o b . c it.


7 L a n oc i ó n d e o c ci d e nte s e f u nda e n d o s h it os h is t ó r ic os: la c r i s t i a n i z a c i ó n d e E u r op a
i n ic i a d a p or e l e m per a d or C o ns t a nt i no e n e l a ño 3 1 3 A D c o n e l E d ic t o d e M i lá n y e n
l a l i mp i eza de sa ng re que exc lu í a de lo s e s pac io s de l occidente cristiano a mu su lm ane s y
j u d í os. L a r e lac i ó n d e Amé r ic a L a t i na c o n e l oc c id e n t e c r ist i a no f u e p r o b le m á t ica d e s d e
l o s t ie m p os d e la c on qu is t a y a lg un os h ist or i ad or e s c o n side r a n qu e l as in f lue nc ia s d e
l o s pue b l os i n d íg e n a s c o nvert ir í an a La ti n oamé r ica e n ot ro t ipo de mu ndo, e n c am b io,
o t r os p r o p on e n q u e l a i n f lu e nc ia d e l os p aí s e s c o l on i zad or e s per m it irí a i nc lu ir a l
Nu ev o Mu nd o c om o una part e de l mundo occidental . E l mismo pr oblema sucede c on
Europa Or iental y Rusia.

7 I nd i os e r a n l o s h a b it a nte s d e L a s I nd i a s, terr it ori o c o nfu nd id o p or l as ex ped ic io ne s

d e Co l ó n c on l a s I nd ias Orie ntal es. Amér ic a no se r econoc ió c omo t al en un pr imer


m om e nt o s in o a ñ os m á s t a r d e c u a nd o A m é r ic o V e s pu c i o “de scu br ir ía” e l e rr or. A lo s
n at i v os d e la s t ie r r a s e nc on t r ad as po r Co l ó n se l e s ll am ó, e n v i r t ud d e l a c o nf us i ón,
i n d i os. A part i r de la s ex ped ic io ne s de Ve sp ucio se co rreg ir ía n ta nt o la c art ogr af ía
c om o e l u s o l i ng ü í s t ic o pe r o la confusión se perpetuaría e n e l n omb re dad o a l o s
n at i v os d e A m é r ica. E n l a m ay or ía d e las l e ng uas e ur o pea s, la p al abr a ind io es la
m is ma pa ra los nat ivos de la Ind i a y par a los pueblos a mer icanos.

7 En ge ner a l la conquista e s pa ñ ol a f u e r e a li z a d a p or la in ici a t i va pr i va d a , e s d e c i r ,

med ia nte u n c o ntr at o o c a p it ul a c i ó n e sta b lec ida e ntre e l rey - o s u re pre se nta nte - y un
p ar tic u lar, po r e l cua l se a ut or i za ba a é ste a c o nq u i s t a r u n t e r r i t o r i o d e t e r m i na d o e n
u n p l azo de t iem po e spec if ic ado . Pa ra e ll o se o rg an i za ba u na h ue ste, al fre nte de la
c u a l se s it uab a un j e fe, qu ie n r e c i b ía d e l r e y d i vers o s t ít ul os po s i b les e n fu nc i ón de la
d im e ns i ón d e la e m p r e s a ( gobe rnad or, adel a ntad o o cap i tán ). A cambio, e l je fe
ex ped ic io na ri o se c om pro met ía a c orre r c o n l os g ast o s de la em pre sa y a re a li z ar la en
e l t iem po f i jad o. L a c a p it ul a ció n deter minaba c lar amente que los t err it or ios
c onquistad os perte necer án a la Cor ona y no al part ic ular y por otr o lad o, las
c oncesione s, siempre flex ibles, pe rmit ían a la Co r on a or ie nta r y dirigir las acciones
d e c on q u is t a hac i a d e t e r m i na d os t e r r i t o r i o s , e n f unc i ó n d e s us i nt e r e ses . Ade m ás, e l
jefe de la exped ic ión recibía inst ruccione s c l a r a s a c e r c a d e s u s f u nc i o nes p a r a c o n la
h u e s t e , la po b l a c ió n nat i va, l a a c c ió n m i lit a r y l a e m is i ón d e i nf or m e s s o bre d e
re su lt ados. P o ster iormente se inc or p o r a r ía u n f u nc i on a r io r e a l o vee d o r, que velaría
p o r e l c ump li m ie nt o de la s c o ns ig na s y la as ig naci ó n a l re y de su pa rte de l b ot í n.
7 Ver Nota N° 1.
7 A l gu no s a ut or e s argum e nt a n que la m od e r n i da d o c c ide nt al se ría u n co nce pto
omniaba rcante y original, qu e se hab r ía i nte ntad o repl ica r a l o lar g o d e l m u ndo
c o lo n i zad o p o r l a s po t e n c ias e u r opea s y q u e l os pr oce s o s d e mode rnización de fines
de l siglo X IX y pr ime ra mitad de l XX en Amér ic a L at ina de bían ser c onsiderad os
c om o u na fas e de pos c ol oni za c ió n c ul t ura l y d e e x p a ns i ón d e l s istema capit alista. Hay
a ut ores q ue p r op o ne n e l c once pt o de mode rnidades múltiples y c onsideran que en t a les
p r oc e s os s e h a br í a n d e s a r r o l lad o d i ver sos p r ogr ama s ec o nóm ic o s, c u ltur a les y
p o l ít ic os de m o d e r n iza c i ón s e g ú n d i ver s o s m od e lo s , e n d i fere nte s p a íse s a mer ica n os.
E s c on ve n ien t e r e vi s a r t a nt o e l o r ige n d e l a n oc ió n d e mode rnid ad occide nt al en Eur o pa
c om o e l e x c e pc io n a l i s m o d e l a mode rnid ad a me rica na as í co m o otr o s p roc es os de
tr a nsf or mac ió n y oc ciden ta l i zac i ó n c om o e l ca so de J ap ó n q ue, ju nt o a l a noc i ón
c on t e m po r á n e a d e a nti m o de r n ida d p res en te e n u n a c on ce pc ió n nega ti v a de la
m oder n idad, cuy os p ort ado res ser ía n lo s m o vim ie nt os p olít ic os rad ica le s de la
i z qu ierd a lati n o amer ica na. Se c o ns ider a en l as c ie nc ia s s oc ial es y eco n óm ica s qu e l a
R e v o l u ci ó n I nd us t r ia l se r ía e l pa s o e v ol ut i v o que co nd uc ir ía a u na soc ied ad desde u na
e c o nom í a a g r íc o la t r a d ici o n a l h a s t a u na c ar acterizada por pr oce sos mecanizad os de
p r odu c c i ón p a r a f a b r ic a r y ve nder biene s a gr an e scala. La R e vol u c i ón i n d us t r i a l
e nt onces, en tant o inicio de avance s y desarr ollos en las cie nc ias aplicad as se ría el
p r ime r pa s o h a c ia la mod e rnidad . E l de sarrollo de nue vas t ecnologías, c omo cienc i as
a p l ic ad as, e n u n c l im a s oc ia l y c u lt ura l rece pt iv o , ser ía n la s co nd ic i on es par a que
t uv ie r a lug ar un a re v ol uc i ó n i nd u s t r ia l q u e r e s u l t a d e in n ov a c i on e s y t a m b ié n la s
pr oduce, e n una d inámica de p os it i ve f e e d -b a ck, como una cade na e n un proc eso
ac umu la tivo de t e c n o lo g ía, que cre a, d is tr ib uye y ven de bi ene s y ser v ic ios ,
s up ues tame nte me jo ra ndo e l n i ve l y l a ca l idad de v ida de u na s oc iedad. S er ía n e sta s
l a s co nd ic ion es bá sic as de la mo d e r n iza c i ó n un c ontext o de c a p i t a l is m o i n c ip ie n t e, má s un
sistema educat ivo y cult ural favorab l e a la in no v a c ió n t e c n o l óg ic a y a la mod e rnidad
c o m o c ul t u ra junto al ll amado e sp ír i t u e mp re n de do r. L a no adecu ac ión o f a lta de
c or r e s po nd e n c ia e nt r e u n o s y o t r os f a c t ore s y c ond ic i o nes c r e a r ía d e s e q u i l i br i os e
in just ic ia s pr of und as. Es o p in ión de muc h os ec on om ista s y s oc ió lo gos que ta le s
d e s e q u i l ib r io s e n l o s pro c e s os d e i nd u s t r ia l i za c ió n y m od e r n i z a c ió n e s t a r í a n s ie m pr e
ac om pa ñad os de u na muy gr ande i nes ta b il id ad soc ia l, c on s ider ada p or lo s te ór ic os de
l a m od e r n i za c i ó n c om o h is tó r i ca me nt e ine vi ta ble. E l t ra ba j o d e Ca rl os M arx e n El
Capital ( 1 8 67 ) , y a a nu nc i a d o e n e l Ma n if ie s t o C o mu n i s t a (1848), trata jus t a m e nt e d e la s
luc has sociales que se ge neran de los pr oces o s de ind ust ria lizac ión y mo der n izac ión
e n e l ca p ita li sm o. Es a pa rt ir de e se a ná l i si s que M arx des arro l l a su te or ía de l a luch a
d e cla s e s que c o ns i ste en l a l u cha e c o nó m i c a ca racter i zad a p or l a res i ste nc ia de l a c la se
o b r e r a a s e r e x p lo t a d a , r e s is t e nc ia q u e s e m an if ie sta e n la de fen sa de lo s i ntere ses
inmed iat os de los t ra bajad ore s s in poner en c ue st ió n la nat ura le za de l s i stem a. La
l u cha i d e ol ó g ic a q u e s u p on e la o p os ic i ó n d e d is t in t as c o ncepc i one s de la socied ad y la
l u cha po lí t ic a q ue se man i f ies ta e n e l e nf ren tam ie nt o de la s c la ses soc ia le s p or la
a pr o p iac i ón del pode r del Es tado . L a luch a de clas es es quizá e l c oncepto más
s i gn i fic at i vo de l as c ienc ia s soc i ale s de l s ig l o XI X y su pert i ne nci a h istó r ica p udo
c on st atar se e n e l crec imi e nt o de l mo v im ie nt o ob rer o o rga n iz ad o en e l mu nd o. Éste
crec im ie nt o s u pu so l a to ma de c o nc ie nc ia d e lo s tr ab aj adore s de que p erte nece n a
u na c l ase s oc ia l d is ti nt a a l a d e su s pa tr on os y que par a me jo ra r su si tuac ió n l a ún ic a
ví a es la de l a luc ha. La h ue lga h a s id o la pr inc i pa l arm a e n l a luc ha o b rera e n e l
c on text o de l a lu ch a de clase s y ha s id o c o n es ta arm a que l o s t ra ba jad ore s ha n
n eg oc iad o c on l o s patr o n os s us ex ige nc ias y rei v i ndi cac i o nes, med ia nte un a
dem os trac i ón de fue rza a l par a li zar l a pr oducc i ón de l as i ndu str ia s. V er: BE RIA IN,
J O SEX T O. Mode rnid ades múlt ipl es y e n c ue nt ro s d e c i v iliza c i o nes en Re vista Mad.
N o. 6. May o 2 0 0 2. D e pa r t a m e nt o d e A nt r o p o lo g ía. U n ive r s id a d d e C h i le y t a m b ié n S .
N. E ISEN ST ADT: “ Mult iple m odernit ies” e n D aed al us, V o l . 1 2 9, n. 1 , 2 0 0 0, 1 - 31 ,
t amb ié n Die Vie lfalt de r Mode rne, G ö t t i ng e n, 200 0 ; a s í c om o l o s t r a ba jo s d e C H .
T AYL OR y B. LEE: Multiple Mode rnitie s: M ode r n ity a nd D if f e ren c e, C h icag o, Ce nter f o r
T r a n s c u lt u r a l S t u d ie s , 1 99 8 , 1 0.
7 T r a ns c ult u r a c i ó n e s e l c on ce pt o que a ntec ede en a ntr o po l og ía al de a c ul t u r a c i ón y se

re f iere a l “co n j unt o de c on tact o s e i n tera cci o nes rec í pr oca s e nt re la s cu lt ura s”. Fue
f or m u la d o a f i na le s d e l s i g l o X IX po r d i ver s o s a nt r o p ó lo g os n or t e a m e r ic a n os , s ob r e
t od o p or e l e t n ó lo g o J . W . P o we l ls (1880), para caracte r izarlo en su I n t e r p ret a c i ó n d e
l a s c i vi l iz a ci on e s . Se gún Powe ll, e l fe nómeno acontecer ía en var i as secue nc ias. En
p r ime r l ug ar, l a c ul t ur a a ut óc t on a se o p ond rí a a l a c o nq ui st ado ra, d e s pué s, c o n l a
p r ol o ng aci ón del c o ntac to , se em pe zar ían a ac e p t ar a lg un o s eleme nt os y se
r e c ha z a r ía n o t r os , per o h a br ía q u edad o sembr ad o e l ge rmen de una cultura sincré tica.
E s e n la t e rce ra fase , e s c ua nd o s e h ab la d e he te rocultura, c o nce pt o q ue p uede
aplicar se cuand o el e t no tip o o me nt alidad c o lect iva que c o nst it uye con la le ngua uno
de lo s su str at os de la cu lt ura, es afect ad o de fi n it i vamen te por i nter ve nc i one s
exte r iores. Es e nt o nces cuand o los ind i vidu os, c ortad a la mem or i a y con su s is tem a
s oc ia l t r a ns f orm ad o, s e c o n ve r t ir ía n e n age nt e s o pe r ac i o na les d e l e t noc id io
( autoetnocidio). Se prod ucir ía luego la asimilación c om p let a y d e s a pa r i c ió n d e f i n it i va
d e l a c ul t u ra o r i g i na l , a l a c e pt a r l os va l or e s d e l otro. L os c a na le s f und ame nt al e s d e e s t e
pr oceso se rían tr es: l a rel i g ió n, l a es c uel a y la em p re sa. Co ns umad a la a c u l t u ra c i ó n e
inst alada la he te rocul t ura, p od r í a , s e g ú n P o we l l ha b la r s e d e e t n o c i d i o p o r a s i m i l a c ió n. E l
f e n óm e n o d e la acul turación , del i n g lés a c cult urat io n, se re fiere al proceso de
ad aptac i ón a o t r a c ul t u ra, o a l a re cepc i ón de e l la, p o r par te de un p ueb l o a tra vé s de l
c on tact o c on o t ra c i v il iza c i ó n s upue sta men te m ás de sar rol l ada . Fre nte al v oc ab lo
a c ul tur a ci ó n, e l c u b a n o F e r na nd o Ort i z p r op u s o e l u s o d e l t é r m i no t ra n sc ult u r a ci ó n y l o
presenta de la siguie nte mane ra:
( … ) e nt e n d e mo s que e l vo ca b l o transc u lt urac ión expre sa mej o r las dife re ntes f ases
d e l p ro ce s o t ra ns i ti v o de un a c ul t u ra a o t ra, p o r q ue é s t e n o c o nsi s t e s ol am e nte e n
a d qu i r i r u n a c u l t u r a , q ue e s l o q ue e n r i g o r i nd i ca l a v o z a n g l o -a me r i ca n a
ac u ltur ac ión, s i no q ue el p r o ces o impl i c a ta mb ié n n e ces a ria me nt e l a pé r di da o
d e s a r r a ig o de u na c ul t ura p re ce d e nte, l o q ue pud ie r a de c i rs e u na pa r c ial
de sculturac ión, y, a de más, sig nif ica la co ns igu ie nt e c r e a c i ó n d e n u e v o s f e n ó men o s
c u l t u ra l e s q ue p ud ie ra n d e n o m i na rs e n e o c u lt u r a c ió n. D ich o co n c ept o d e la s
i n fl ue n c ias y l as t r ansfo r m a c i on es c ultu r al es no s pe r m it e ve r el p u nt o de vi st a
latinoame ricano del fe nómeno, y re vela una res i s te n c ia a c on s ide r a r l a c ul t u ra p ro pi a y
t r ad i c io n al, que re c ib e e l imp ac to e x te r no q u e h ab r á de m od if i ca rl a, c o m o u na e nti d ad
s olame nte pasiva o incl us o infe rior, dest i na da a l as m ay o re s pé rdid as, sin ni nguna
c l a s e de r e s p ues ta c re ad o ra. E n e l p r oce s o de transc u lt urac ión p od r í a n id e n t if ic a r s e
t r e s e t apa s : -a ) u na pa r c ial p é rd id a de l a c ul t u r a q u e p ue de al c an z a r d iv e rs os g ra do s
y afe c ta r varia das zonas t ray e nd o cons ig o s ie mp re l a pé rd ida d e comp onente s
c o n si de ra d os co m o obs ole to s; b ) la i n co r poración de la cult ura exte rna; c) el es fue rz o
d e re c om po s ici ó n m ed ia nt e el m a nej o de l os e le me nt os q u e so b re v i ve n de l a cu ltu r a
o r i g i na r ia y lo s q u e v ie ne n de f ue r a. Ent o n ces, se pued e de c i r q ue ha y pé rd i da s,
se le c ci o nes , red es c ub r i mie nto s e i n c o rp o ra c i o nes, y q ue es tas ope r a ci o n es se res uel ve n
d e n t r o d e u na r e e s t ru c t u r a c ió n g e ne ral d e l s is te m a c ul t ura l , q ue e s la funció n creadora
m ás al ta q ue p ue de c u mpl i rse e n u n p ro c es o i nt e rc ul t u ral .( … ).
Ver ORTIZ, FE RN ANDO, Co n t rap un te o c ub an o d e l az ú ca r y e l tab a co. E d i t or ia l
Ayacucho. Caracas, 1997.
7 U n o de lo s pr i nc i pa les i de ól og o s de est a n oc ión fue e l mex ica n o Jo sé V asc o nce l os

cuy a te sis cen tr al e ra q ue la s dist i nta s razas de l mund o tie nde n a me zc larse cada ve z
m ás, has ta forma r u n nue vo t i p o h u m a n o, c om pu e s t o c o n la se lecc ión de cad a uno de
l o s pue bl o s e x is t e n t e s . S u l i br o L a raz a c ós m i c a s e pu bl i c ó p or p r i m e r a ve z t a l
p res ag i o e n l a ép oc a e n q ue pre va lecí a en e l mu nd o c ie nt íf ico l a d o ct r i na d a rw i n is t a d e
l a se le c c ió n n at ura l q ue sa l va a lo s apt o s, c o nde n a a los d é b i les que, l le vad a a l
te rre no s oc ia l por G o b in eau , d i o ori ge n a l a teo r ía de l ar io p ur o, de fe nd ida por l os
i n g le s e s , l le v a d a a i m p os ic i ó n po r e l na z i s m o .
7 Ver Nota N°: 12.
7 Ver : J OSÉ V AS C ONCEL OS, PEDRO HEN RÍQ UEZ UREÑ A y ARTURO USL AR

P IET R I, as í c om o ALEJA ND R O DE HUMB OLDT, e n tre otro s.

7 I ND I GE NIS MO e s e l c on j un to de i dea s y acti v id ades c on cret as q ue re al i z an l os

i n ve st ig ado re s y e stud io s os en l o s e st ad o s la t i n o a m e r ic a no s e n r e lac i ó n c o n l a s


p o b la c i o nes i n d í g e n a s . E s t a s i n ic iat i va s d e las c ie nc ia s s oc ia le s l le v a n e l no m br e
ge nér ic o de i n d ig e n is m o s e g ú n l a d e f i n ic ió n d e l s oc iól o g o m e x ic a n o R od o lfo
S t a ve nh a g e n. E l s u jet o s i n e q u a n o n d e l i nd ig e n i s m o e s e l i nd io , t é r m i n o q u e n a c e d e la
equivocación geográfica de C r i s t ób a l C o ló n, c u a nd o a la v is t a d e l o s p r i m e r os
h a b ita nte s que e nco nt ró e n Guanahaní l o s l l a m ó i n d i os p le name nte co n ven c ido de que
h a b ía l le g a d o a la a nt e s a l a d e la s s o ñ a d a s I nd ia s O r ie n tale s, c o n vicc i ó n q u e po r l o
me n os ex pl ica t al de n om i nac i ón par a t od os lo s n at u ra les de A mé r i c a y que, c omo s el lo
i m bo r r a b le , p e r s i s t i ó p a r a s u s descen d ien tes. E ste e rr or fu e e l p r inc i p io de muc h os
o t r os q u e e n d e f in it i va m a r c a r o n h a s t a nuestr os d ías e l d i fícil camino de los
naturale s americ anos. El indio fue presentado al resto del mundo a través de un
c on cep to léx ic o gené r ic o y c om o cate go rí a s oc ia l e n co nd ic i o nes de fi n ida s y
c on cret as prede term i nada s p or l os e u r op e o s . D ic e B o n f i l B a t a l l a q u e e l n om br e
e nma scar ó su e s pec if ic idad h is tó ri ca y l o c o n virt i ó de nt ro del nue vo orde n colonia l e n un
ser plural y uniforme . I ne xact it ud qu e o bs tacu l i z ó p or tre s s ig l os y m ás, e l
d e s e n v o lv im i e nt o d e lo s h o m b r e s a u t ó c t on o s de Amér ica, ya que al e nglobar los e n un
t é r m in o ú n ic o q u e d a r on o c u lt a s d i f e r e nc i as es enc i ale s, ta le s c om o: n i v e les de
d e s a r r o l lo c u lt u r a l, l e n g u a s , v i s io ne s d e l m und o, r e l ig io s ida d , m it os , h is t o r i a y t od o
l o q u e c o n s t it u í a l a manera de ser d ife renc iada y únic a, propia de c ada uno d e los
g ru po s pr eh i s pá n ico s. La pa l ab ra i n d io n o e x p li c a ba a l a nt ig uo y , l ue g o d e l a
c on q u is t a l u s o h is pa na , a l d om i nad o h a b it a nte de Amé ric a, só l o lo n om br ab a a par ti r
d e la un i fi c ad a imp e r ia l idad h i sp a na c om o c at e g or ía s oc i al s omet id a. C f. :
STAVENHAGEN, RODOLFO. D e r e c h os i nd í g e nas y D e re ch os h u m a n os e n A m é r i ca L a t i na,
C o leg i o d e M é x ic o, M é x ic o, 1 9 8 8 . V I L L OR O , L U I S . L o s g ra nd e s m o me n tos d e l
i n d ig e n i s m o e n M é x i c o, C ol e g i o d e Méx ic o/ F C E , M é x ic o, 1 9 96 . A L C I D E S RE I S S N E R ,
R A ÚL. E l ind i o e n l os d i c c i o na r i os, e x é ge s is l é x ic a d e un e s t e re o t ip o, In s t itu t o N a c io n a l
I nd ig en i sta, c o l. IN I, núm. 6 7, Méx ic o, 19 8 3. BA LLESTE ROS G A IB ROI S, MAN UEL
y J UL IA ULL O A S UÁREZ. I nd i gen i s mo ame ri ca n o, C ul t ur a H is pá n ica , M ad r id, 19 61 .
B R OWN, LE STE R R. S t ate of the Wo r ld 1 99 3, Or ga ni z ac ió n de las N ac ion es Un id as,
W. W. N orto n a nd C om pa ny , N e w Y or k, 19 9 3. C AS O, A LF ON S O. I nd ig e n i s m o,
Ed it or ia l Cul tu ra, Méx ico , 19 5 8. CAS O, AL FONS O y FA V RE, HEN RI. L ’ I nd i g é n is me ,
P r e s s e s U n iv e r s i t a ire s d e France, Pas, 1996. LEWIS, OS CAR y ERNEST E. MOES.
“B ase s pa ra u na nueva def i nici ó n p r á c t i c a d e l i nd i o”, e n A mé r i ca I nd í ge na, vo l. 5 ,
M éx ico, 1943.

7 Dentr o de estos fe nómenos gen era les de tra n scu lt urac i ón ha br á m at ices im p orta nte s
s e gú n sea n l a s c ar ac t e r ís t ic as d e l os p a ide umas o visiones del mund o, p arti c ip a ntes e n
cad a rel ac ión e n p art icul ar . P uede ocu rr ir que do s t ip o s de me nt al id ades , pue sta s en
c ontact o, tenga n ra sg os dist int ivos y ú n ic os cada u na per o que, e n su nive l ge ner al
de e v ol uc ión y des arr o ll o i ns t ituc i on a l, s ea n equ i par a ble s au nq ue se las c o ns ide re
“m uy d iferentes ”. E n ese c as o, los interc ambios puede n efect uar se inte r p a re s , lo que
l o s hac e m ás ace pt ab le s. E n l a vi s ión o c c id e n t a l d e l m u ndo, l o s s ist e m as i nt e r no s d e
d ominac ión caracte r íst icos de t oda soc ied ad org an i zad a, se e sta blece n alrededor de
n o r m a s r a c io n a les , q u e e v ita n lo s a b u s o s d el p od e r p or p a r t e d e a lg u n o d e lo s g r u p os
y a sí perm ite n l a pr ogr es i va pre p onder anc i a de l a ra z ó n c ien t íf ic a y tecn o l óg ic a, e n
a rmo n ía c on e l pe nsa mie nt o e moc i on a l, y es as í c om o se l o gra e l e qu i l ib r io qu e
caracte r iza a las c omunidades te cnot róp i cas, p ro gre s ist as de Occ ide nte. L a vis ión
o c c id e n t a l d e l m u nd o s u p o ne q u e a m b os g rup o s e n co nt act o, au nque d i fere ntes ,
p uede n l le ga r a su b li mar s us otredade s c o nf lictivas (costumbres, le nguaje, religión,
etc .) y que en e se pr oceso se e nr iquece n. Ver: HUNT INGTON, op. cit.
7 Ve r: E LI ADE S, M I RCE A. El m it o d e l e te r n o reto r n o; a r q ue t ipo s y repe t ic i ón , Barc el o na,
P l a ne t a -A g os t in i, 1 9 8 4.
7 P ar a Jo sé Le zam a L im a: ( … ) E s a g ra n t r a d i c i ón r o m á nt i ca , l a d e l c a l a b oz o, l a a u s e n c ia, l a

i m ag e n y la m u e rt e, l og r a c r e a r e l he cho a me r i c ano, cuy o dest ino es tá más he ch o de ause ncias


p os ib l e s q u e d e p r e s e n c ias i m p os ibl e s . La t r ad i ci ó n de l as a us e nc ia s p os i ble s h a s id o l a g ran
t r a d i c ió n a m e r i c a na y d o nde s e s it ú a e l h e ch o h is t ó r i co q u e s e h a l o g r a d o.(…)En: LEZ AMA
L IMA, JOSE. La e x p r e s ió n a me r i ca n a. F C E , 19 9 3, M é x ic o, pp. 1 0 7 - 1 32 .

7 J osé T om ás B oves c onsider aba que s er blanc o er a un de lit o. Se c uenta que c o lg ó de


u na c e i ba a u n os t re int a d e s us al i ad os re a li s t a s s ó l o p or e s t a causa. Cf.: HE RRE RA
L UQ UE, F RA NC IS C O. B o ve s : El u r og all o, B a r c e lo n a -Ca r a c a s - B u e n os A ir e s , E d it or i a l
P om a i r e , 1 2a . e d ic ió n, 19 8 0.

7 Godos, ga ch up ine s, ch ape tones, mat urra ng os , s on al gun o s d e lo s t é r m i n os c o n l o s que se


de si gn ab a n a l o s eur o pe os y es pa ño l es e n la e stra ti f icac ió n de las ca sta s de l as
s oc ied ades c o lo n ia le s amer ic an as. Es b ue no rec orda r q ue, en muc has p art es d el
mu nd o, l os a pe l l ido s emp e zar o n e ntre l as e l ite s y só l o si gl o s de sp ués fuer o n ba ja nd o
e n la esc a la s oc ia l h ast a q ue la ge nte o rd i nar i a pud o tene r lo s. En I ng la terr a, l a ge nte
c om ú n só l o e m pe z ó a t e n e r ape l l id os d e s pué s d e l a E d ad Med ia y e n J a pó n s ó lo fue a
f ine s de l s iglo XIX cua nd o se au to rizó a la ge nte ord inar ia te ner a pe llido . L a ge nte
c om ú n e n Ir á n v in o a t e ner a pe l lido s - s e le s o r d e nó q u e l o s t u v ie r a n - e n e l s i g lo
XX. L os d ue ño s de e scl a v os e n e l S ur de E stad os U nid o s a nte s de la g uerr a c iv il
e s t a ba n p a r t icu l a r m e nte o pu e s t os a q u e l os e sc l a vo s t uv i e ra n a pe l li d os p or que
s ubray aban los víncu los f am iliare s y e l ú n ic o v í nc u lo le g a l m e nt e r e c on oc id o q u e
p od ía te ner u n esc lavo er a co n s u due ñ o, q u ie n p od ía ven d e r l o m u y l e jo s d e s u
f am i li a. L os e sc l a vo s m ism os, s in e m b a r g o, u s a b a n a pe ll id os par a crear un se nt id o de
f am i lia, au nq ue te nía n cu id ado de no u sar los e n pre se ncia de los bla nc os. Au n
de sp ués de lo s p roce s os d e i ndepe nde nc ia, l o s n egr os q ue h a b ía n sid o cr i ado s e n la
e sclavitud frecuent eme nte vac ilaban cuand o a lg ú n b l a n c o le s p r e g u n t a ba s u a pe l l id o.
L os l l am ad o s n o mb r e s d e e s cl a vo s q u e t a n t o s n e g ros descend ie nte s de esc l avos
em pe za ro n a re pud iar e n l o s a ñ os 60 en E st ado s U n id os, n i le s fuer o n dad os p or lo s
due ñ os de esclavos ni er an usualmente los ape llid os de los due ñ os de esclavos. Eran
n o m b r e s e s c o g id os pe s e a la s pr o hi bi c io ne s , para simbolizar los la zos familiares que
f recue ntem en te era n más fuerte s que lo s que h ay e n l os guet os negr o s de h oy e n d ía
e n E stad o s Unid os . P ara los nom bre s de los af rode sce nd ientes e n e l Car i be, ve r:
A S CENC I O M I CHELLE, Los n o mb res de l os es cl avo s, y ta mbién CAB RERA, LYDIA, El
Monte, Oc tav a reed ic ió n. Ed ic i o nes U n i ver sa l. M i am i, Fl or ida. 20 0 0.

7 V er: PÉ REZ ANT ON I O, o p. ci t. P. 1. El c o nt i nen te amer ic an o c o n oc ió un


v i g or os o c r e c im ie nt o d u r a nte e l S ig l o X VI I I. L a p o b la c i ón d e l a Amé r ic a e s p a ñ ol a
c r e c i ó e n u n o s 1 6 m i l l on e s d e ha b it a nte s y s e c a l c u la a f i n d e s ig l o ha b ía e n Amé r i c a
u n os 8 m i llo ne s de ind io s, 4 m i l lo ne s d e mes t i zo s , 3 m i l lo ne s d e b la nc o s c r i o l lo s y
u n m i l l ón d e e s c la v os n e g r os . E l c r e c im ient o d e l a p ob la c i ó n f u e im p or t a nt e e n
c iud ades c om o L A H a ba na y Bu en os A ire s. E n e l c am po pred om in a ba n l o s gra nde s
lat ifund ios y crec ió notableme nte el tr áfic o m e r c a nt i l c o n e l v i e jo m u nd o d e l q u e s e
b en ef ic ia ba l a bur gue sí a c omerc i an te e sp añola y cr iolla de Amér ica. A cambio de
a rt ícu l os i ndu str ia le s, A mér ica pro p orc i o na ba a Eur op a p r oduct os co m o ta bac o,
ca ca o y a zúca r pe ro d uran te e l per iod o ret roced ier o n las expo rt acio nes de or o y plat a
de l Nue vo M u ndo. P ara f ac il i tar e l com erc io co l o n ia l, se cre ó en 17 2 8 l a Co mp añ ía
d e C o m e r c io G u i pu zc oa na d e Caracas, fusionada más tarde p or la d e F i l i p in a s . S e
cre ar on en Amér ica nuevas unive rsidade s, se rea l i za ro n im po rt an tes v ia je s c ien tí f ic os
y t am bi én p r ogre sar o n c o ns ider abl eme nte la I m pre nta y l a Pre ns a. S e c on so l id ó
e nt on ces un a é l ite cul tu ra l que p r om o vi ó e l r e f o r m ism o a me r i ca no . Pe rd idas a
c om ie nz o s de l s ig l o XV II I su s p ose si o ne s e n Eur o pa, E sp aña c ent ró su s e sfue rz o s en
A mér ica, i nte nta nd o lo gr ar u na mayor i nte g r a c ió n e c o n óm ic a y a d m i n is t r a t i v a y la
p o l ít ic a d e M a d r id c oi nc id ió c o n u n n ot a ble c rec im ie nt o d e la po b lac ió n cr io lla. Lo s
bl a n cos a me r ic a n os o c r i ol l os c ada ve z menos necesitaban de la administrac i ón ce ntr al
p a r a d e f e nde r s u s pr op ied a d e s f r e nt e a l os i nd ios . S e c a lcu l a q u e e n 1 7 97 p o b la ba n la
A m é r ica e s pa ñ o la u n o s 1 5 m i l lo ne s d e h a b. d e lo s que u na q ui nt a par t e e ra n b la nc os
n ac id os a l lí y se h ab ía n f or mad o e n u n i vers id ades de l c o nt ine nte. Lo s l ídere s c ri o l l os
s e m ost ra ban re ac io s a c o la bo rar co n l a hac ien da rea l y cr it ic ab an fue rteme nte e l
m o no p o li o d e S e v i l la -Cád i z. A pa r e c e n e nt o nces mercados y mercaderes en el Caribe
y S u d a m é r ic a c o n m e j or e s pre c i os q u e l os d e la m e t r ó p o l i, lo q u e hi z o a l o s c r io l l o s
t oma r conc ie nc ia de lo inju st o de l m onopolio, La l ib e rta d c o me r c ial n o s o l o no
a pa c i g u ó l os á n imo s c r io l l o s s i n o q u e l os s o li v ia nt ó a ú n m á s , a e x c e pc ió n d e C u b a ,
ya que la apert ura be ne fic i aba a los c omer c i a n t e s pe n in s u la r e s e n s u s o pe r a c i o nes
c on la s c o l on i as m ás no a lo s ame r ica n os. Una a v alancha de merc ancías , text iles y
a gua rdie nt es c ata lane s in u ndó lo s m ercad os a mer ica n os, e n de tr ime nt o de los
p r oduct os i nd íge na s. E s pa ña pen i ns u la r hu nd ía en el s ubd esa rr o l lo a a lg una s reg i one s
a me r ica na s c o m o la mex ic a n a, per ua na y ar gen t i na, l o que s irvi ó par a, a vivar a ún m ás
e l res e nt i mi ent o c r iol l o c o ntr a la c orte de Madr id. La s cue st i one s eco n óm ica s, de índ o le
s oc ia l y po l ít ic a t e r m i na r ía n po r i nd i s p one r a la p o b la c i ó n m á s i n f l u y e nt e c on s t it u ida
por las é lites cr iollas al surgir pr oyect os c omo el d e la abolic ión de las e nc omiend as
l o que des ag rada ba pr of und ame nte a los terr ate nie ntes mex ica nos y peru anos. El
supuesto propósito de la administración bor b ón i c a d e l a il u s t r a c i ó n e s p a ñ o la e r a
m it ig ar la s d isc ri mi n acio ne s ra ci a les , el im i na ndo fr o nter as e ntre b la nc os y mest i z os,
c os a que tam b ién di sgus ta ba m ucho a l os c r iol l o s. L a p o l ít ic a ref or mis ta de Car l os
I I I h a b ía imp l ic a d o r e d ob l a r e l c o ntr o l s o bre e l g o b ie r n o c o lo n i a l a c os t a d e r e c or t a r
l o s p od e r e s d e l os c r io l l o s . T a m po c o l a Ig les i a perma ne c ía i nd ife ren t e an t e los
c a m b i os i nt r o d u c id os p or e l r e f o r m is m o b or b óni c o e n e l c on t in en te amer ic an o pue s
l e a fe c t a ba l a a c t ua c i ó n d e u n e st ad o que luc ha ba p or limit ar su s p r ivile g i os y s us
i n gre so s. Co m pl ac ien te c o n la c ort e mad r ileñ a, a qu ie n de b ía su p r om oci ó n, l a
j er arqu í a ec le si ást ic a n o p arec í a dar se c uen ta de q ue e l b a jo c ler o t amb ién em pe za ba
a d ist anc iarse de la monar qu ía.

7E l Congre so de Va le nc ia se reu n ió e n e sa c i udad de l 6 de may o a l 14 de octu bre de


1830, consagró la separació n d e V e n e zue la d e la G ra n Co l om b ia y a pr ob ó u na
C o ns ti tuc i ón q ue e stu vo e n vige nc ia dur an te 27 añ o s. F ue co n vocad o po r dec ret o de l
ge ner a l J osé A n to n io Páe z , e n su c ar ácter de jefe c i v i l y m il it ar de Ve ne zue l a, c o n
f e c h a 1 3 d e e ne r o d e 1 83 0 .
7 La no ve la p ó stu ma d e J osé Mar í a A rgued as, El z o r ro d e a r rib a y e l z o r r o de a ba jo, e s
u n bue n e je m p lo d e e s t e t ip o d e m a n if e st acione s. Ver: ARG UED AS, JOSÉ MARÍA.
El zorro de arriba y el z o rro de abajo. E d it or ia l L o s a d a , B u e n os A i r e s , 1 9 7 1.

7 E s d e u s o c om ú n e n l a l it e r a t u r a h is t ó ric a y e n c ie nc i a s p o l ít ica s h a b la r d e
O l i ga r q u ía -de l gr ieg o o l ig os ( poc os) + a r q u ía (poder) - par a re fer ir se a un a f or m a d e
g o b ie r no do nde s on po co s q uie nes eje rce n e l p od er po l ít ic o. E l té rm i no se ha
u t i l i za d o p a r a d e s c r i b ir l a c om p o s ic i ón d e l os g ob ie r n o s e x c lu s iv o s d e la s é l ite s
d ominantes que han e jerc id o el poder e n d i ver sa s s oc iedades y per íod o s h i st ór ico s.
L os perte nec ie ntes a ta le s é l ite s s on l l amad os Oli g a rcas. Ol igarquía, e n c ien c ia p o l ít ica,
e s e l térm ino que se usa par a r eferir se a u n a forma de g obier no e n que e l poder
supremo está en manos de unas pocas personas. L os escr it ore s polít ic os de la a nt igua
Gre cia emplearon el términ o para designar la f o rma de ge ne ra da de a r i s t o c ra c ia.

7 G ALE AN O, EDU A RDO. Las ve nas ab ie rtas de A mé rica Lat ina , B u e n os A i r e s , 1 9 8 4 y

para la te oría d e la de pende n cia , ver A ndré Gun der Fr an k, ec on om is ta, s oc i ól og o ,


a nt r o p ó lo g o, c ie nt íf ic o s oc i a l, n a c id o e n A le m a n i a , t r a b a j ó e n E s t a d o s Un ido s ,
C a nadá, Amér ic a Lat i na, Á fr ic a y Eu ro pa. En señ ó en Bra si l, y de s pués e n M éxico y
l l e g ó a C h i le e n 1 9 6 8 d onde v i v ió h a s t a 19 7 3, hac ie nd o c la s e s e n l a s e s c u e la s d e
e c o nom í a y s o c i o l og ía d e l a Un i ve r s id ad d e Ch i le . E nt r e s us o br as m á s c o noc id as
f i gur a n: C apit alis mo y s ubd esa r r oll o en A mé r i c a Lat in a ( 1967); Acumulació n mundial 1 4 9 2 -
1 7 8 9, Cris is e n la e c o no mía mu nd ial ( 19 8 0 ) y E l s is t e m a m u ndi a l: ¿ Q u in ie n t os o c i nco
m i l a ñ os ? Du ra nte lar go t iem p o su tr a ba jo te óri c o se c o nce ntr ó e n la te or ía d e l a
de pe ndenc ia y e l ex amen de las re lac ione s ce nt ro - per ifer ia, cue st ion ando e l pa pe l de
la l l amad a b urg uesí a n ac io na l, s ub ord i nada al c a pi t a l e x t ra n jero .
7 V e r l a c om p l e t a b i b li og r a f ía s u m i n is t r a d a e n e l we bs ite c on s t r u id o p or N O R B E RT O

RAS: Criollismo y Modernid ad .Un anál is is formal de la id iosincras ia crioll a.


7 P or e je m p lo , p a r a e l a nt r o p ól og o f r a nc é s Jac que s Lizot, qu ie n h a e s t u d ia d o d u r a nte

m u c h o t ie m p o l a c u l t u r a d e lo s i nd í g e na s y an o ma m i, q u ie nes h a b it a n e n l a Am a z o n ía
v e ne zo la n a , l a c ul t u r a y a n o ma m i ser ía u na cultura destruida. Ver: HUIZ I, IS ABEL.
D ib u j o Y a n o m a m i, Cat á log o, Mu se o de Bellas Arte s de Car acas , 2005.
7 C a r l os Ma r x e s c r i bi ó: L as id eas de l a clas e d omi n a nt e s on las i deas d om i na n tes e n c ada

é po ca ; o, d i ch o e n ot r os té r m i no s, la cla se qu e eje r ce el p od e r “ma te r ial” d om i n a nte e n la


s o c ied ad es, al m is mo t iemp o, s u po der “es pi r i tu al” d om i n an te. La cla se que t ie ne a su
d is po s ic i ó n l os me d ios pa ra la p r od u c c ió n m ate r i al disp o ne c o n ello , al m is m o tie mp o, d e l os
m e d i os pa ra l a p r od u cc i ó n e s p i r it ual, l o q u e h a ce que s e l e s o met a n, al p r o pio t ie mp o, p o r
t é rmi n o me d io , l a s i d e a s d e qu i e n e s ca r e c en de l os me d io s n e c e s a r i os p a ra p r od u c ir
es pirit ual me nte. Las ideas dominantes no s o n o t ra c os a q u e l a exp r esi ó n i de al [e n i dea s ] d e l as
rel a ciones mate riales dominantes, l as mismas relaciones mate rial es domi na nte s c on c e b i d a s c om o
i de as; po r ta nt o, l as rel ac i on es q ue h a ce n d e una de te rmi n ad a c lase , l a cl ase do mi n a nt e, o sea,
las ideas de s u dominación . C. MA RX y F . ENGEL S Obras Es cogidas, T. 1. E d it ori a l
P r o g r e s o, Mo s c ú , 1 97 3, p p . 11- 4 4.

7 C f. Ca rta d e B o l ív ar a F ra nc isc o d e Pau la Sa nt and e r: S om os el vil re to ño de l es pa ño l


p r e da do r , q ue v i n o a A mé ri c a pa r a s a ngr a r l a h as ta t ro n a rl a bl a n ca y pa r a re p rod u c i rs e co n s us
víct imas. Más t a rde, la desce nden c ia i leg ít i ma de est as u n i o ne s se j u nt ó c o n l os d esce nd ie n tes de
l os es clavos traídos de África. Con semej ante mez cla racial y tal es ante ce dente s moral es,
¿ po de m os a cas o pe r m it i r n os p o ne r a l as l e y e s p o r e n ci m a de l os l íd e res y a l os p r i n c ip io s p or
e n c i ma de l os h o mb res ? T ambién ve r las reflex iones de Octavio Paz y E zequie l Mar tínez
Es trad a, e ntre otr os.
7 Ma rta Tra ba y J ua n Acha, s o n d os au tor es c ruc ia le s e n la cr ít ic a y la hi sto r ia d el
a rte e n Lat in o amér ic a. C o n d i fere nte s po stu ras y e n di fere nte s é p oca s, am b os s on
importante s par a c o nocer el desarr ollo ar t íst ic o la tinoame r icano fr ent e a la s
c orr ie nte s no rte amer ican a s y e ur opea s d om ina nte s. Ver e l text o “D os décad as
vulnerables de las artes plásticas latinoamer ic an as ” de Ma rta Tr ab a, e s pecí f ic ame nte
e l c ap ít u lo de l a décad a de l a e ntre ga y lue go, e n e l l i br o “Las cu lt ura s esté tic as de
América Latina” de Juan Ac ha, conf rontar lo que e ste aut or tie ne que decir acerc a de
l a i n va s ió n t e c n ol óg ic a e n t r e 1 9 5 0 -1 97 0 y l a a bs t r a c c i ó n.
7 U n o de l os m it o s más d ifu nd id os de la cu lt ura i nst it uc io na l lat i n oamer ic an a e s e l
de la f or ta le za de i nst it uci o nes c om o, p or e jem p lo , l os mu se os de a rte, cuy as
c o lecc ione s y de sar rollo ha obedec ido a criter ios e ur océntr icos y cuy a moder n izac ión
s e ha vist o r e zag ada dad a la poc a f orma ción d e cu adr os téc nic os y gere nc ia les
ca paces d e em pre nder cam b ios sus tant i vos e n la s m i sma s.
7 E l est udi o de l a ic on ogr af ía en la em b lemá tic a de l os ll amad os p art id os
dem ocr át ic os de Amér ica Lat i na, e n l a s pr imeras déc adas de l siglo veinte e s tare a
p end ie nte de l a hi st or ia de l as arte s v i su a les d e La t in oa mér ica .

7 A cc i ón Dem ocr át ica en V en ez ue la y e l AP RA e n el Pe rú s ur g ier on en l a p ri mera


m it ad de l si g l o XX c om o su pue sta s i nte rpr etac i o nes au té nt ica s, i nde pe ndie nt es e
i n é d i t a s d e u na rea l idad i n d oa me r i ca na. Se c o ns ider ab an a sí m is mo s c on i n str ume nt os
p ar a l le va r a c a b o e st r ate g i as d e l uc ha a nt ii m per ia l is t as y pr og rama s d e l u ch a
i n d oa me r i ca n a. A l g u n o s pa r t ido s l a t i no a m e r ic a no s b a s a r on s u i d e a r i o, o r g a n i za c i ó n y
f or mas d e luc ha en plantea mie nt os s im ilares a los de l AP RA y Acc i ón Dem ocr át ica.
A fi na le s del s ig lo XX, a nte la s nueva s for m a s d e e x p a ns i ón d e l i m pe r i a l ism o y la
c om pl e j id a d d e l o s c a m b i o s s oc i o po l í t i c o s e n A mér ica Latin a, e ra e v ide nte que ta le s
c on c e pc i o ne s n o d a ba n l a s r e s pu e s t a s q u e s e nece s ita ba n y e s os p art ido s su fr ier o n
s er ias d i vi s io ne s requ ir ie ndo n ue vas i n ter pret ac i one s de l a re al id ad y r eac om od os
p o l ít ic os que resu l tar o n i n ef icac es an te l os des af í os de la seg und a m it ad de l s ig l o XX
l at i n oame r ica n o. L os ob s o let os e nf oq ue s d e l A P RA, su i nd o ame r ica n is m o y su
s up ue s t a luc h a a nt ii mper ia l i st a, a sí c om o su e sq ue ma d e fre nt e ú nic o d e c l ase s, su
métod o de análisis y e l de safío de confronta c i ón c on e l nue v o m a r c o e s t r a t é g ic o d e l
p od e r d e l os E s t a d o s Un i d o s e n e l c on t ine nt e h a n m a nte n id o t a nt o a l A P RA e n e l
Pe rú c om o A cc ió n Demo crá ti ca e n V ene z uela, prác ticame nte fue ra d e l j u e g o p o lí t i c o
de sde hace casi una década.

7 C f . I n f o r m e s o bre D e s a r r o l lo H u m a n o, UN D P , 2 0 0 0. L os I D H r e s u l t a n d e u n
cá lc ul o in teg rad o de t asa s d e l on ge vi dad, m atr icu la ci ó n en in st it uc io ne s educa t iv as y
nive l de vida.

7 L as r ad io n ov e la s y t e le no v e l as m e x ic a n as ba sad a s e n las h ist or ia s d e Car id ad B r a v o

A d a m s , m e x i c a na q u e r e s id i ó y la b or ó e n Cu ba du ra nte décad as, tuvieron un espacio


p r i vi le g i a d o e n La novela del aire, a través de la s emisoras habaneras RHC Cadena
A z u l y CMQ R ad io a lo l ar go de 1 7 a ñ os. La t rad ic i ón mex ic an a e n e ste cam p o e s
n o ta b le y la s p r oducc i one s de es te pa í s in und ar on de la l lamad a f ot on o vela a lo s d e m ás
p a íse s l at ino ame ric a no s d e h a bla his pa na . Un a d e l a s f ue n t e s i m po rta nt e s d e l as
t e le n ov e l a s m e x ic a n a s f ueron las historietas o co mi cs , e n es pec ia l aq ue l los a rgum ent os
l l e vad os a l p a pe l p or Y o la nda Var g a s D u lc he desde la déc ada de l 40, cuand o se
e stre na en l a te le v is i ón mex ic an a. De sde 1 96 8, p a s a r o n a l a t e len o ve la p r oc e d e nt e s
de la h i st ori et a pr oducci o ne s com o El rub í, c o n 1 60 c a p ít u l o s t r a ns m it id os y q u e
s up eró la aud ie nc ia de mu ch os pr og rama s e ste la res y otr as c om o Lad ronz uel a, que ya
h a b ía t r a ns i t a d o p or e l c i n e e n 1 9 49 y q u e e n 19 6 6 f u e l le va d a a la t e len o ve la . V e r :
B OR RAT, HÉ CT OR. Des a rrol lo y te ndencias de l as indust rias cult urales e n Amé rica La t i na
y E u ro pa Ib é r i c a: Esp a ci os p úbl i c os , e s t ata l e s y p r i va do s. Cu ltu ra y c omu n icac i ó n s oc ia l:
Amér ica L atina y Eur o pa Ibér ica. III Enc ue n t r o I be r o a m e r ic a n o d e I n ve s t iga d ore s d e
C om u n ic a c ió n . Ce ntr o d e I n ves t ig a c ione s de la Comunicación. Barc elona,
Universidad Autónoma, 1 9 9 4 ; G E T I N O, O C T A V I O. Las i n d us t r ia s c u l t u ra l e s y e l
M e r c o s u r. Revist a Of ic ios T erre stre s, Año 1, Númer o 2. ( s. l.). L a P lat a. F acu lt ad d e
P e r iod i s m o y C om u n ic a c i ó n S oc ia l. U ni ve r s id a d N a c i ona l, 1 9 9 6. ( p p . 1 2 a 17);
C O ST A , CRI ST IA NE. Eu c o m p r o ess a m u j e r. Ro m an c e e c o ns u m o n a s Tele n o vela s b r as ile i ra s
e m e x i c a nas. R i o J a ne ir o, J or g e Z a her E d it or L t d a . , 2 0 0 0.

4 2 L a e r a m od e r na nac e c o n la n oc ió n d e s u b je t i v ida d c om o p r i n c i p i o c o nst r u c t i vo d e

la totalidad. N o obst ante, la sub je tiv i dad e s u n e fect o de l os d is c u rs os o t ex t os e n l os


q ue e st amo s s it uad os. Al h acers e c ar go de lo a nte ri or, se puede e nte nder por qué e l
m u n d o p o s t mo d e r n o se caracte riza por una mult iplicid ad de j ueg os de l e n g uaj e q ue
c om pi te n e ntr e sí , per o de l o s q ue n i n gu no p uede rec lam ar l a leg it im idad def i ni t iv a
de su forma de m ostra r e l m undo. Con l a de sle g it imaci ó n de la r ac io na l idad
t ot al i zad or a p ro cede lo que ha v e nid o e n l l am arse e l f i n de la h ist o ria. L a
p os tm od e r ni dad re ve la que la r a z ó n h a s i d o s ó l o u na n ar r at i va m á s e nt r e o t r as e n la
hist or ia ; u n a gr an nar rat iva, s i n duda, per o u n a de ta nt as. Es ta mos e n pres enc i a de la
mu erte de los met a rrela to s, en l os que la ra zó n y su s u jet o –c om o de ten tad or de l a
unida d y la t otal idad– e sta lla n. S i se m ira con má s de te nim iento, se t rat a de un
movimiento de dec o nstrucc i ón de l co g it o cartesiano y de las utopías de unidad. Aquí
de be su bra ya rse e l irreduc i b le c arácte r l o cal d e t od o d is c ur so , l o que no s i n sta la a l
m a r g e n d e l d is c u r s o d e l a t r a d ic i ón a r t í s tica y est ét ica occ ide ntal. Tal ve z de ahí
p r ove n ga la v i t a l id ad d e lo s e n ge ndr os d e l o s d iscu r so s a r t íst ic os per i fér ic os .
S u b s ist ie r o n, n o o bs t a nt e e n L a t i n oa m é r ic a , e nc la ve s de cu ltu ra c o smo po l i ta en t odo
e l co nt i ne nte, qu e ba j o e l r o pa je de l as v a ng uard ia s as um i ó pa rad ó ji cam ent e, la
c on ser va ción de l o s l ider az go s ar t ísti c os y cu lt ura le s occ ide nt ales tr ad icio n a les. E stas
p o lé m ic a s , d is c u s i one s y d i a t r i bas l le na r o n t od a la pr ime r a m it a d l a h is t o r ia
i n te lectu a l y cu lt ura l del s ig l o XX la ti n oame r ican o y aú n c on t in úa n, por l o que es
b u e no r e c o r d a r q u e : E n u n a c ul t u ra e n u n m o men t o d ad o , n un c a h a y m ás de una sol a
é p isté mè, q ue d e f i n e l as co n d i ci o nes d e p os ib il i dad d e t od o s ab e r. S e a e l q ue s e m a n if i e s t a e n
u n a t e o r ía o a q uel q ue e s t á s il e n ciosame nt e envuelto e n una práctica. Ver : F OU CA ULT,
M I CHE L , Las palabras y las cosas , Gallimard , P a r ís , 1 9 6 6, p. 1 79 .

43 I nc lus o la l lamad a “D octr i na Mo n roe ” c o nti e ne e leme nt os de este se nt im ie nto


a nt ie x t ra n jero . F orm u lada p or Jame s M o nr oe, p re sid e nt e d e l os E st ad o s Un ido s
d u r a nte d os per í od os c on s e c u t i vo s ( 1 8 17 - 18 2 0 - 1 82 1 - 1 82 4 ) , e n s u d is c u r s o d e
i n a u g u r a c i ón d e l a s s e s i o ne s d e l C o ngr e s o d e 1 8 2 3, e x pu s o l a t e s is d e l o q u e s e
c on oc e r í a c o m o “ D oct r i n a M o nr oe” , e n r e l a c ió n a l a n o -c o l o n i zac i ón. E s a d oc t r in a
ex pre sa ba que l os c o nt in en tes ameri ca n os e n lo s uces i vo n o de bí a n ser c on s iderad os
c om o s u je t o s d e n i ngu na c o l o ni zac i ó n f u t ur a p or n i ngu na p ot e nc ia e u r o pea . L a
c on secue nc ia má s im p ort an te de dich a doc tr in a f ue la cre ac ió n de l a t eo rí a de l as d os
es fe ras y d e a l l í q u e s e h a b l e d e l a d oc t r i na M on r o e c om o d e l a d oc t r i na d e “ Am é r ic a
p ar a l os amer ic an os ” que im p lic a la noc i ó n de “A mér ica p ar a l os nort amer ic an os ”
q ue e s c om o se aut ode nom ina n los est adounide nse s.

44 La s te or i zaci o ne s s o bre l a s re lac i on es ce nt ro -p er ife ri a se rem o nta n p o r l o


me n os a Wer ne r S om ba rt (D e r mod e r ne K a p i t a l i s m us, 1 9 02 ) , s i n o e s a Ma r x ( la s
re laciones ciudad/ campo) y fue ut ilizada t am b ié n p or l os t e ór ic os d e l i m per ia l is m o
( R os a L u x e m bu r g o , B ou k har i ne) , a s í c o m o t a m b ién p o r l o s e c o n om i s t a s d e la s
de siguald ades de de sarrollo, q u e f u e r o n q u i e ne s l e d ie r on s u f or m a c on t e m p or á nea
( Sam ir Am in , Le dé vel oppeme nt inégal, 1 9 73 ) . Al a i n R e y n a u d d e s a r r o l ló la n oc i ón e n
ge og raf í a (Société, espace e t j us t ice, 1 9 81 ) .

45 E l p a n a mer i c a n is m o de fie nde la postura “panameric ana” d esde lo que José Enr ique
Ro dó l l amó " n ord om aní a” . E l p a name r i ca n is m o c u e nt a c o n u na d e c la r a c i ón p ú b l ica ,
o f ic ia l y s o lem ne e n l a d octr i na de M o nr oe. L os e n fo ques de l p a n a me r i ca n is m o parten
d e d os p r inc i pi o s q u e c o n s ide r a i nc o n t r ove r tible s: a) que la conce pc i ón católica e
h i s pá n ica e s u na c o nce pc i ón med ie va l f raca sad a y su pe rad a e n l a h ist or i a y b) q ue l a
c oncepc i ón sajona y protestante const it uye e l n e r v io d e l p o r v e n ir a m e r ic a n o. P or
e l lo , e l p a name r i ca n is m o pre tende la aglutinación de América y s u u n i f i c a c i ó n po l ít ic a y
c u lt ura l c on arr e g lo a la s n orm as e i n st it u c i one s d e l p u e b lo n or t e a m e r i c a n o y c on
d ic ho f i n, l os g o b ie r no s d e l o s E s t a d o s U n id os ha n seg u ido la s polít icas llam ada s de l
" b ig st i k" (Te odo ro R o os ve lt ) y la s de la “ay uda” eco n óm ica y téc nic a ( “A l i an z a p ara
e l Pr ogre s o” e “I n ic iati v a p ara las Amé ric as ”) as í como el apoy o a la cre ac ión y
p erf ecc io nam ie nt o de la Or ga ni z ac ió n de lo s Es tad os Ameri ca n os (OEA ). Inc l us o e l
l l am ado “P la n Co l om b ia ” p uede inc lu ir se de ntr o de la s ini c iat i va s que re su lt an de
e ste en fo que. Ve r: ATK INS G. POPE, ed. The Unit ed St ate s and Lat i n A me rica:
R e d e f i ni n g U.S . pu r po s e s i n the P os t -C o l d Wa r Era , 1 9 9 2. Un i ve r s it y of T e x a s P r e s s ,
A u s t i n. p. 1.

46 La fr o nter a e s pr oc la mada, tam b ié n, c o mo garantía de l derec ho de propiedad -


« est o es m ío , est o e s tuy o »- der ech o que se m arca e n f orm a de p uert as, ba rrer as ,
cer radu ras y ca rte les orde na nd o «Pr o hi b id o p as ar ». La fron ter a f i ja l os l ím ite s de
hasta d ónde se puede llegar, lo «t oler ado» y «adm it id o», los n ive le s est ame nt ar io s de
l a d ifere nc ia e n q ue se fu nda t oda d om in ac ión y de pende nc ia, p or d onde pa san
t amb ié n la s de si gua ld ade s que fu nda n la s d ife re nc ia s y la s i n j ust ic i as de la s cu a les
Amér ica L atina ofrece tant os e jemplos. F r o nt e r a s e c o n óm ic a s y d e s u bde s a r r o l lo ,
f ro nte ra s s oc ia le s y p sic o ló gi cas, l in gü í st ica s, ét n ica s y cu lt ura le s, en tre may or ía s
d om in a n t e s y m i n or ía s s i n p os i b il id a d d e ex pre sar se, pr o lif era n e n un c o nt i nen te
m ar c ad o p or su d i ver sidad y po r la s d e si gua ld ad e s q ue l as a gud i za n h as t a e l l ím it e d e
lo insopo rtable. Ver: M AÑ AC H , J ORGE , Te o ría d e l a f ro n te ra, E d it or ia l U n i ve r s it a r ia
d e P u e r t o Ric o, S a n J u a n, 1 9 7 0, p. 5 5.
47 V e r : A RC AY A, P E D RO M A N UE L. E s t u d io s d e s oc i o lo g í a v ene zo la na. C ar acas :
E d it or ia l C e c i l io A c ost a , 1 9 4 1; C A R RE R A D A M A S , G E R M Á N . L a c r i s i s d e l a
s oc ied ad c ol o n ia l ve nez o l an a. Carac as: G obe r n a c i ón d e l D is t r it o F e d e r a l, 1 97 6;
I RAZ ÁBAL , C A RL OS. V ene zuel a, e scl a va y feud al. Caracas: Ate neo de Car acas,
1 9 8 0; P A RD O, I S A A C J . E s t a t ie r r a d e g r a c ia. 5 ª e d . C a r a c a s : Mo nte Á v i la , 19 8 6;
S I S O, C A RL OS . L a f or m a c i ó n d e l p u e b lo venezo l an o: est ud i os so ci o l óg ic os. 6 ª ed.
M adr id: Pu bl i cad o p or el E scr it or i o Siso, 1982; VALLE NILL A L ANZ, L AURE ANO.
Cesar ismo democr át ic o. 5ª ed. Car acas: Univer s idad Sa nt a Mar í a, 1984, B R ITO
F IG UE R OA, FEDE RIC O . «L a e s t ruc t ura so c ia l y d e m ogr áf ic a d e Ve ne zue l a
c o lonia l». EN: Re vis ta de Hist or ia. Car aca s, núm . 7-8, abr il-ag os to, 1961; LEAL ,
I L DEF ON SO . « L a a ri st o c rac i a c r i oll a y e l c ód igo n e gre r o d e 1 78 9 ». E N: Re v ist a d e
H i s t or ia. C a r a c a s , n ú m . 6 , e ne r o, 1961; MAZA ZABALA , DOMI NGO FELIPE.
« Me s t i za je y e s t r a t if ica c i ó n d e c l a s e s e n V e ne zue la ( 17 8 0 - 1 83 0 ) . E N : Re v is t a
U n i ve r s it a r ia d e H i s t or ia. C a r a c a s , núm . 6, s e p t iem br e -d ic iem br e , 1 9 8 3.
48 R OD Ó, JOSÉ EN RIQ UE. Ariel. E n Ob ra s compl eta s. Editoria l Aguila r, 1957.
8 D E HUMBOLDT, ALEJ AND RO. Ensayo P ol ít i co sobre l a Nueva Es paña. Tr aduc id o a l

caste l lano por Don Vicente González Ar na o. Terce ra ed ic ión c orre g ida, a ume ntad a y
ador nada con mapas. París: Librería de Lecointe, 1836, 5 vols .

9 Cf. V AS C ON CEL OS, o b . c it.


10 La noc i ón de occidente s e f u nda e n d o s h it o s h is t ó r ic os: l a c r is t ia ni z a c ió n d e E u r o pa
i n ic i a d a p or e l e m per a d or C o ns t a nt i no e n e l a ño 3 1 3 A D c o n e l E d ic t o d e M i lá n y e n
l a l i mp i eza de sa ng re que exc lu í a de lo s e s pac io s de l occidente cristiano a mu su lm ane s y
j u d í os. L a r e lac i ó n d e Amé r ic a L a t i na c o n e l oc c id e n t e c r ist i a no f u e p r o b le m á t ica d e s d e
l o s t ie m p os d e la c on qu is t a y a lg un os h ist or i ad or e s c o n side r a n qu e l as in f lue nc ia s d e
l o s pue b l os i n d íg e n a s c o nvert ir í an a La ti n oamé r ica e n ot ro t ipo de mu ndo, e n c am b io,
o t r os p r o p on e n q u e l a i n f lu e nc ia d e l os p aí s e s c o l on i zad or e s per m it irí a i nc lu ir a l
Nu ev o Mu nd o c om o una part e de l mundo occidental . E l mismo pr oblema sucede c on
Europa Or iental y Rusia.

11 I n d i os e r a n l o s ha b it a n t e s d e Las I nd i as, terr it ori o c on fu nd id o po r la s ex ped ic io ne s

d e Co l ó n c on l a s I nd ias Orie ntal es. Amér ic a no se r econoc ió c omo t al en un pr imer


m om e nt o s in o a ñ os m á s t a r d e c u a nd o A m é r ic o V e s pu c i o “de scu br ir ía” e l e rr or. A lo s
n at i v os d e la s t ie r r a s e nc on t r ad as po r Co l ó n se l e s ll am ó, e n v i r t ud d e l a c o nf us i ón,
i n d i os. A part i r de la s ex ped ic io ne s de Ve sp ucio se co rreg ir ía n ta nt o la c art ogr af ía
c om o e l u s o l i ng ü í s t ic o pe r o la confusión se perpetuaría e n e l n omb re dad o a l o s
n at i v os d e A m é r ica. E n l a m ay or ía d e las l e ng uas e ur o pea s, la p al abr a ind io es la
m is ma pa ra los nat ivos de la Ind i a y par a los pueblos a mer icanos.

12 En gene ral l a co n q u is t a e s pa ñ o la f u e r e a li z a d a p or la i ni c i a t i va pr i va d a , e s d e c i r ,

med ia nte u n c o ntr at o o c a p it ul a c i ó n e sta b lec ida e ntre e l rey - o s u re pre se nta nte - y un
p ar tic u lar, po r e l cua l se a ut or i za ba a é ste a c o nq u i s t a r u n t e r r i t o r i o d e t e r m i na d o e n
u n p l azo de t iem po e spec if ic ado . Pa ra e ll o se o rg an i za ba u na h ue ste, al fre nte de la
c u a l se s it uab a un j e fe, qu ie n r e c i b ía d e l r e y d i vers o s t ít ul os po s i b les e n fu nc i ón de la
d im e ns i ón d e la e m p r e s a ( gobe rnad or, adel a ntad o o cap i tán ). A cambio, e l je fe
ex ped ic io na ri o se c om pro met ía a c orre r c o n l os g ast o s de la em pre sa y a re a li z ar la en
e l t iem po f i jad o. L a c a p it ul a ció n deter minaba c lar amente que los t err it or ios
c onquistad os perte necer án a la Cor ona y no al part ic ular y por otr o lad o, las
c oncesione s, siempre flex ibles, pe rmit ían a la Co r on a or ie nta r y dirigir las acciones
d e c on q u is t a hac i a d e t e r m i na d os t e r r i t o r i o s , e n f unc i ó n d e s us i nt e r e ses . Ade m ás, e l
jefe de la exped ic ión recibía inst ruccione s c l a r a s a c e r c a d e s u s f u nc i o nes p a r a c o n la
h u e s t e , la po b l a c ió n nat i va, l a a c c ió n m i lit a r y l a e m is i ón d e i nf or m e s s o bre d e
re su lt ados. P o ster iormente se inc or p o r a r ía u n f u nc i on a r io r e a l o vee d o r, que velaría
p o r e l c ump li m ie nt o de la s c o ns ig na s y la as ig naci ó n a l re y de su pa rte de l b ot í n.
13 Ver Nota N° 1.
14 A lg un o s a ut ores argum e nt a n que la modernida d occident al ser í a u n co nce pt o
omniaba rcante y original, qu e se hab r ía i nte ntad o repl ica r a l o lar g o d e l m u ndo
c o lo n i zad o p o r l a s po t e n c ias e u r opea s y q u e l os pr oce s o s d e mode rnización de fines
de l siglo X IX y pr ime ra mitad de l XX en Amér ic a L at ina de bían ser c onsiderad os
c om o u na fas e de pos c ol oni za c ió n c ul t ura l y d e e x p a ns i ón d e l s istema capit alista. Hay
a ut ores q ue p r op o ne n e l c once pt o de mode rnidades múltiples y c onsideran que en t a les
p r oc e s os s e h a br í a n d e s a r r o l lad o d i ver sos p r ogr ama s ec o nóm ic o s, c u ltur a les y
p o l ít ic os de m o d e r n iza c i ón s e g ú n d i ver s o s m od e lo s , e n d i fere nte s p a íse s a mer ica n os.
E s c on ve n ien t e r e vi s a r t a nt o e l o r ige n d e l a n oc ió n d e mode rnid ad occide nt al en Eur o pa
c om o e l e x c e pc io n a l i s m o d e l a mode rnid ad a me rica na as í co m o otr o s p roc es os de
tr a nsf or mac ió n y oc ciden ta l i zac i ó n c om o e l ca so de J ap ó n q ue, ju nt o a l a noc i ón
c on t e m po r á n e a d e a nti m o de r n ida d p res en te e n u n a c on ce pc ió n nega ti v a de la
m oder n idad, cuy os p ort ado res ser ía n lo s m o vim ie nt os p olít ic os rad ica le s de la
i z qu ierd a lati n o amer ica na. Se c o ns ider a en l as c ie nc ia s s oc ial es y eco n óm ica s qu e l a
R e v o l u ci ó n I nd us t r ia l se r ía e l pa s o e v ol ut i v o que co nd uc ir ía a u na soc ied ad desde u na
e c o nom í a a g r íc o la t r a d ici o n a l h a s t a u na c ar acterizada por pr oce sos mecanizad os de
p r odu c c i ón p a r a f a b r ic a r y ve nder biene s a gr an e scala. La R e vol u c i ón i n d us t r i a l
e nt onces, en tant o inicio de avance s y desarr ollos en las cie nc ias aplicad as se ría el
p r ime r pa s o h a c ia la mod e rnidad . E l de sarrollo de nue vas t ecnologías, c omo cienc i as
a p l ic ad as, e n u n c l im a s oc ia l y c u lt ura l rece pt iv o , ser ía n la s co nd ic i on es par a que
t uv ie r a lug ar un a re v ol uc i ó n i nd u s t r ia l q u e r e s u l t a d e in n ov a c i on e s y t a m b ié n la s
pr oduce, e n una d inámica de p os it i ve f e e d -b a ck, como una cade na e n un proc eso
ac umu la tivo de t e c n o lo g ía, que cre a, d is tr ib uye y ven de bi ene s y ser v ic ios ,
s up ues tame nte me jo ra ndo e l n i ve l y l a ca l idad de v ida de u na s oc iedad. S er ía n e sta s
l a s co nd ic ion es bá sic as de la mo d e r n iza c i ó n un c ontext o de c a p i t a l is m o i n c ip ie n t e, má s un
sistema educat ivo y cult ural favorab l e a la in no v a c ió n t e c n o l óg ic a y a la mod e rnidad
c o m o c ul t u ra junto al ll amado e sp ír i t u e mp re n de do r. L a no adecu ac ión o f a lta de
c or r e s po nd e n c ia e nt r e u n o s y o t r os f a c t ore s y c ond ic i o nes c r e a r ía d e s e q u i l i br i os e
in just ic ia s pr of und as. Es o p in ión de muc h os ec on om ista s y s oc ió lo gos que ta le s
d e s e q u i l ib r io s e n l o s pro c e s os d e i nd u s t r ia l i za c ió n y m od e r n i z a c ió n e s t a r í a n s ie m pr e
ac om pa ñad os de u na muy gr ande i nes ta b il id ad soc ia l, c on s ider ada p or lo s te ór ic os de
l a m od e r n i za c i ó n c om o h is tó r i ca me nt e ine vi ta ble. E l t ra ba j o d e Ca rl os M arx e n El
Capital ( 1 8 67 ) , y a a nu nc i a d o e n e l Ma n if ie s t o C o mu n i s t a (1848), trata jus t a m e nt e d e la s
luc has sociales que se ge neran de los pr oces o s de ind ust ria lizac ión y mo der n izac ión
e n e l ca p ita li sm o. Es a pa rt ir de e se a ná l i si s que M arx des arro l l a su te or ía de l a luch a
d e cla s e s que c o ns i ste en l a l u cha e c o nó m i c a ca racter i zad a p or l a res i ste nc ia de l a c la se
o b r e r a a s e r e x p lo t a d a , r e s is t e nc ia q u e s e m an if ie sta e n la de fen sa de lo s i ntere ses
inmed iat os de los t ra bajad ore s s in poner en c ue st ió n la nat ura le za de l s i stem a. La
l u cha i d e ol ó g ic a q u e s u p on e la o p os ic i ó n d e d is t in t as c o ncepc i one s de la socied ad y la
l u cha po lí t ic a q ue se man i f ies ta e n e l e nf ren tam ie nt o de la s c la ses soc ia le s p or la
a pr o p iac i ón del pode r del Es tado . L a luch a de clas es es quizá e l c oncepto más
s i gn i fic at i vo de l as c ienc ia s soc i ale s de l s ig l o XI X y su pert i ne nci a h istó r ica p udo
c on st atar se e n e l crec imi e nt o de l mo v im ie nt o ob rer o o rga n iz ad o en e l mu nd o. Éste
crec im ie nt o s u pu so l a to ma de c o nc ie nc ia d e lo s tr ab aj adore s de que p erte nece n a
u na c l ase s oc ia l d is ti nt a a l a d e su s pa tr on os y que par a me jo ra r su si tuac ió n l a ún ic a
ví a es la de l a luc ha. La h ue lga h a s id o la pr inc i pa l arm a e n l a luc ha o b rera e n e l
c on text o de l a lu ch a de clase s y ha s id o c o n es ta arm a que l o s t ra ba jad ore s ha n
n eg oc iad o c on l o s patr o n os s us ex ige nc ias y rei v i ndi cac i o nes, med ia nte un a
dem os trac i ón de fue rza a l par a li zar l a pr oducc i ón de l as i ndu str ia s. V er: BE RIA IN,
J O SEX T O. Mode rnid ades múlt ipl es y e n c ue nt ro s d e c i v iliza c i o nes en Re vista Mad.
N o. 6. May o 2 0 0 2. D e pa r t a m e nt o d e A nt r o p o lo g ía. U n ive r s id a d d e C h i le y t a m b ié n S .
N. E ISEN ST ADT: “ Mult iple m odernit ies” e n D aed al us, V o l . 1 2 9, n. 1 , 2 0 0 0, 1 - 31 ,
t amb ié n Die Vie lfalt de r Mode rne, G ö t t i ng e n, 200 0 ; a s í c om o l o s t r a ba jo s d e C H .
T AYL OR y B. LEE: Multiple Mode rnitie s: M ode r n ity a nd D if f e ren c e, C h icag o, Ce nter f o r
T r a n s c u lt u r a l S t u d ie s , 1 99 8 , 1 0.
15 T r a ns c ult u r a c i ó n e s el c on ce pt o que a ntec ede en a ntr o p ol og ía al de aculturación y se

re f iere a l “co n j unt o de c on tact o s e i n tera cci o nes rec í pr oca s e nt re la s cu lt ura s”. Fue
f or m u la d o a f i na le s d e l s i g l o X IX po r d i ver s o s a nt r o p ó lo g os n or t e a m e r ic a n os , s ob r e
t od o p or e l e t n ó lo g o J . W . P o we l ls (1880), para caracte r izarlo en su I n t e r p ret a c i ó n d e
l a s c i vi l iz a ci on e s . Se gún Powe ll, e l fe nómeno acontecer ía en var i as secue nc ias. En
p r ime r l ug ar, l a c ul t ur a a ut óc t on a se o p ond rí a a l a c o nq ui st ado ra, d e s pué s, c o n l a
p r ol o ng aci ón del c o ntac to , se em pe zar ían a ac e p t ar a lg un o s eleme nt os y se
r e c ha z a r ía n o t r os , per o h a br ía q u edad o sembr ad o e l ge rmen de una cultura sincré tica.
E s e n la t e rce ra fase , e s c ua nd o s e h ab la d e he te rocultura, c o nce pt o q ue p uede
aplicar se cuand o el e t no ti p o o me nt alidad c o lect iva que c o nst it uye con la le ngua uno
de lo s su str at os de la cu lt ura, es afect ad o de fi n it i vamen te por i nter ve nc i one s
exte r iores. Es e nt o nces cuand o los ind i vidu os, c ortad a la mem or i a y con su s is tem a
s oc ia l t r a ns f orm ad o, s e c o n ve r t ir ía n e n age nt e s o pe r ac i o na les d e l e t noc id io
( autoetnocidio). Se prod ucir ía luego la asimilación c om p let a y d e s a pa r i c ió n d e f i n it i va
d e l a c ul t u ra o r i g i na l , a l a c e pt a r l os va l or e s d e l otro. L os c a na le s f und ame nt al e s d e e s t e
pr oceso se rían tr es: l a rel i g ió n, l a es c uel a y la em p re sa. Co ns umad a la a c u l t u ra c i ó n e
inst alada la he te rocul t ura, p od r í a , s e g ú n P o we l l ha b la r s e d e e t n o c i d i o p o r a s i m i l a c ió n. E l
f e n óm e n o d e la acul turación , del i n g lés a c cult urat io n, se re fiere al proceso de
ad aptac i ón a o t r a c ul t u ra, o a l a re cepc i ón de e l la, p o r par te de un p ueb l o a tra vé s de l
c on tact o c on o t ra c i v il iza c i ó n s upue sta men te m ás de sar rol l ada . Fre nte al v oc ab lo
a c ul tur a ci ó n, e l c u b a n o F e r na nd o Ort i z p r op u s o e l u s o d e l t é r m i no t ra n sc ult u r a ci ó n y l o
presenta de la siguie nte mane ra:
( … ) e nt e n d e mo s que e l vo ca b l o transc u lt urac ión expre sa mej o r las dife re ntes f ases
d e l p ro ce s o t ra ns i ti v o de un a c ul t u ra a o t ra, p o r q ue é s t e n o c o nsi s t e s ol am e nte e n
a d qu i r i r u n a c u l t u r a , q ue e s l o q ue e n r i g o r i nd i ca l a v o z a n g l o -a me r i ca n a
ac u ltur ac ión, s i no q ue el p r o ces o impl i c a ta mb ié n n e ces a ria me nt e l a pé r di da o
d e s a r r a ig o de u na c ul t ura p re ce d e nte, l o q ue pud ie r a de c i rs e u na pa r c ial
de sculturac ión, y, a de más, sig nif ica la co ns ig u ie nt e c r e a c i ó n d e n u e v o s f e n ó men o s
c u l t u ra l e s q ue p ud ie ra n d e n o m i na rs e n e o c u lt u r a c ió n. D ich o co n c ept o d e la s
i n fl ue n c ias y l as t r ansfo r m a c i on es c ultu r al es no s pe r m it e ve r el p u nt o de vi st a
latinoame ricano del fe nómeno, y re vela una res i s te n c ia a c on s ide r a r l a c ul t u ra p ro pi a y
t r ad i c io n al, que re c ib e e l imp ac to e x te r no q u e h ab r á de m od if i ca rl a, c o m o u na e nti d ad
s olame nte pasiva o incl us o infe rior, dest i na da a l as m ay o re s pé rdid as, sin ni nguna
c l a s e de r e s p ues ta c re ad o ra. E n e l p r oce s o de transc u lt urac ión p od r í a n id e n t if ic a r s e
t r e s e t apa s : -a ) u na pa r c ial p é rd id a de l a c ul t u r a q u e p ue de al c an z a r d iv e rs os g ra do s
y afe c ta r varia das zonas t ray e nd o cons ig o s ie mp re l a pé rd ida d e comp onente s
c o n si de ra d os co m o obs ole to s; b ) la i n co r poración de la cult ura exte rna; c) el es fue rz o
d e re c om po s ici ó n m ed ia nt e el m a nej o de l os e le me nt os q u e so b re v i ve n de l a cu ltu r a
o r i g i na r ia y lo s q u e v ie ne n de f ue r a. Ent o n ces, se pued e de c i r q ue ha y pé rd i da s,
se le c ci o nes , red es c ub r i mie nto s e i n c o rp o ra c i o nes, y q ue es tas ope r a ci o n es se res uel ve n
d e n t r o d e u na r e e s t ru c t u r a c ió n g e ne ral d e l s is te m a c ul t ura l , q ue e s la funció n creadora
m ás al ta q ue p ue de c u mpl i rse e n u n p ro c es o i nt e rc ul t u ral .( … ).
Ver ORTIZ, FE RN ANDO, Co n t rap un te o c ub an o d e l az ú ca r y e l tab a co. E d i t or ia l
Ayacucho. Caracas, 1997.
16 U n o d e l os p ri nc i pa les i de ól og o s de est a n oc ió n fue e l mex ica n o Jo sé Va sc once l os

cuy a te sis cen tr al e ra q ue la s dist i nta s razas de l mund o tie nde n a me zc larse cada ve z
m ás, has ta forma r u n nue vo t i p o h u m a n o, c om pu e s t o c o n la se lecc ión de cad a uno de
l o s pue bl o s e x is t e n t e s . S u l i br o L a raz a c ós m i c a s e pu bl i c ó p or p r i m e r a ve z t a l
p res ag i o e n l a ép oc a e n q ue pre va lecí a en e l mu nd o c ie nt íf ico l a d o ct r i na d a rw i n is t a d e
l a se le c c ió n n at ura l q ue sa l va a lo s apt o s, c o nde n a a los d é b i les que, l le vad a a l
te rre no s oc ia l por G o b in eau , d i o ori ge n a l a teo r ía de l ar io p ur o, de fe nd ida por l os
i n g le s e s , l le v a d a a i m p os ic i ó n po r e l na z i s m o .
17 Ver Nota N°: 12.
18 V e r : J O SÉ V A SC ON CE L OS , P E D RO HEN R ÍQU E Z URE Ñ A y A RT U RO U SL AR

P IET R I, as í c om o ALEJA ND R O DE HUMB OLDT, e n tre otro s.

19 I ND IG EN IS MO e s e l c on j un to de id eas y ac ti v id ades c on cret as qu e rea l i za n l os

i n ve st ig ado re s y e stud io s os en l o s e st ad o s la t i n o a m e r ic a no s e n r e lac i ó n c o n l a s


p o b la c i o nes i n d í g e n a s . E s t a s i n ic iat i va s d e las c ie nc ia s s oc ia le s l le v a n e l no m br e
ge nér ic o de i n d ig e n is m o s e g ú n l a d e f i n ic ió n d e l s oc iól o g o m e x ic a n o R od o lfo
S t a ve nh a g e n. E l s u jet o s i n e q u a n o n d e l i nd ig e n i s m o e s e l i nd io , t é r m i n o q u e n a c e d e la
equivocación geográfica de C r i s t ób a l C o ló n, c u a nd o a la v is t a d e l o s p r i m e r os
h a b ita nte s que e nco nt ró e n Guanahaní l o s l l a m ó i n d i os p le name nte co n ven c ido de que
h a b ía l le g a d o a la a nt e s a l a d e la s s o ñ a d a s I nd ia s O r ie n tale s, c o n vicc i ó n q u e po r l o
me n os ex pl ica t al de n om i nac i ón par a t od os lo s n at u ra les de A mé r i c a y que, c omo s el lo
i m bo r r a b le , p e r s i s t i ó p a r a s u s descen d ien tes. E ste e rr or fu e e l p r inc i p io de muc h os
o t r os q u e e n d e f in it i va m a r c a r o n h a s t a nuestr os d ías e l d i fícil camino de los
naturale s americ anos. El indio fue presentado al resto del mundo a través de un
c on cep to léx ic o gené r ic o y c om o cate go rí a s oc ia l e n co nd ic i o nes de fi n ida s y
c on cret as prede term i nada s p or l os e u r op e o s . D ic e B o n f i l B a t a l l a q u e e l n om br e
e nma scar ó su e s pec if ic idad h is tó ri ca y l o c o n virt i ó de nt ro del nue vo orde n colonia l e n un
ser plural y uniforme . I ne xact it ud qu e o bs tacu l i z ó p or tre s s ig l os y m ás, e l
d e s e n v o lv im i e nt o d e lo s h o m b r e s a u t ó c t on o s de Amér ica, ya que al e nglobar los e n un
t é r m in o ú n ic o q u e d a r on o c u lt a s d i f e r e nc i as es enc i ale s, ta le s c om o: n i v e les de
d e s a r r o l lo c u lt u r a l, l e n g u a s , v i s io ne s d e l m und o, r e l ig io s ida d , m it os , h is t o r i a y t od o
l o q u e c o n s t it u í a l a manera de ser d ife renc iada y únic a, propia de c ada uno d e los
g ru po s pr eh i s pá n ico s. La pa l ab ra i n d io n o e x p li c a ba a l a nt ig uo y , l ue g o d e l a
c on q u is t a l u s o h is pa na , a l d om i nad o h a b it a nte de Amé ric a, só l o lo n om br ab a a par ti r
d e la un i fi c ad a imp e r ia l idad h i sp a na c om o c at e g or ía s oc i al s omet id a. C f. :
STAVENHAGEN, RODOLFO. D e r e c h os i nd í g e nas y D e re ch os h u m a n os e n A m é r i ca L a t i na,
C o leg i o d e M é x ic o, M é x ic o, 1 9 8 8 . V I L L OR O , L U I S . L o s g ra nd e s m o me n tos d e l
i n d ig e n i s m o e n M é x i c o, C ol e g i o d e Méx ic o/ F C E , M é x ic o, 1 9 96 . A L C I D E S RE I S S N E R ,
R A ÚL. E l ind i o e n l os d i c c i o na r i os, e x é ge s is l é x ic a d e un e s t e re o t ip o, In s t itu t o N a c io n a l
I nd ig en i sta, c o l. IN I, núm. 6 7, Méx ic o, 19 8 3. BA LLESTE ROS G A IB ROI S, MAN UEL
y J UL IA ULL O A S UÁREZ. I nd i gen i s mo ame ri ca n o, C ul t ur a H is pá n ica , M ad r id, 19 61 .
B R OWN, LE STE R R. S t ate of the Wo r ld 1 99 3, Or ga ni z ac ió n de las N ac ion es Un id as,
W. W. N orto n a nd C om pa ny , N e w Y or k, 19 9 3. C AS O, A LF ON S O. I nd ig e n i s m o,
Ed it or ia l Cul tu ra, Méx ico , 19 5 8. CAS O, AL FONS O y FA V RE, HEN RI. L ’ I nd i g é n is me ,
P r e s s e s U n iv e r s i t a ire s d e France, Pas, 1996. LEWIS, OS CAR y ERNEST E. MOES.
“B ase s pa ra u na nueva def i nici ó n p r á c t i c a d e l i nd i o”, e n A mé r i ca I nd í ge na, vo l. 5 ,
M éx ico, 1943.

20 Dentro de estos fenómenos generale s de transculturación habr á matices


im porta nte s seg ún se an la s car acte ríst ica s de los pa ide umas o v is i o ne s d e l m u nd o,
p a r t ic i pa nt e s e n c a d a r e lac i ó n e n p a r t icular. Puede ocurr ir que dos t i pos de
me nt al id ades , pue sta s en c o ntac to, te ng an ra sgo s di st i nt i vos y ú n ic os cad a un a per o
q u e , e n s u n i ve l g e ner a l d e e v o lu c ió n y d esarrollo in stitucional, sean equiparables
a un que se la s co ns ide re “muy d ifere nte s”. E n ese ca so , lo s in tercamb i o s puede n
e fectu arse inte r pa re s, lo que lo s hac e m ás a c e p t a b le s . E n l a vi s ió n occ id e nta l d e l
mu nd o, lo s s i stem as in ter n os de d om in a c ión car acter íst ic os de t oda socied ad
o rg an i zad a, s e e s t a ble c e n a lred e d or d e n orma s rac i o na le s , que e v i t a n los a bus o s d e l
p ode r p or pa rte de a lg un o de l os gru p os y a s í perm i ten l a pr ogr es i va pre po nde ra nc ia
de l a ra z ón c ie nt íf ic a y tec n o ló gi ca, en a r m o n ía c o n e l pe nsa m ie nt o e m o c io na l, y e s
a s í c om o s e lo g r a e l e q u i l i br io que caracteriza a las comunidades te cnot róp i cas,
pr ogre s ist as de Occ ide nte. La v i s ión occ ide nta l de l m und o su pone qu e am bos gru pos
e n c on tact o, a u nque d i fere nte s, puede n l lega r a s u bl im ar su s otred ades co n fl ic ti v as
(c ostumbre s, le nguaje, re ligión, etc.) y que en ese pr oce so se e nr iquece n. Ver:
HUNT INGT ON, op. cit.
21 V er: EL IADE S, M IRCE A. E l m it o d e l e t e r n o re t or n o ; a rq u e t ip os y r e p e t i c i ó n, B arce l ona,
P l a ne t a -A g os t in i, 1 9 8 4.
22 Para José Le zam a L ima : ( … ) E s a g ra n t ra d i c i ón r o m á nt i ca , l a d e l cal a b oz o, l a a us e n c ia,
la image n y la mue rte, l ogra crear el he ch o ame ricano, cuyo de st ino es tá más he cho de ause ncias
p os ib l e s q u e d e p r e s e n c ias i m p os ibl e s . La t r ad i ci ó n de l as a us e nc ia s p os i ble s h a s id o l a g ran
t r a d i c ió n a m e r i c a na y d o nde s e s it ú a e l h e ch o h is t ó r i co q u e s e h a l o g r a d o.(…)En: LEZ AMA
L IMA, JOSE. La e x p r e s ió n a me r i ca n a. F C E , 19 9 3, M é x ic o, pp. 1 0 7 - 1 32 .
23 J o sé Tom ás B o ve s c o ns ider aba que ser blanc o era un de lit o. Se cuent a que colgó de
u na c e i ba a u n os t re int a d e s us al i ad os re a li s t a s s ó l o p or e s t a causa. Cf.: HE RRE RA
L UQ UE, F RA NC IS C O. B o ve s : El u r og all o, B a r c e lo n a -Ca r a c a s - B u e n os A ir e s , E d it or i a l
P om a i r e , 1 2a . e d ic ió n, 19 8 0.

24 G o d o s , g a c h up i ne s , chapet ones, mat urrangos, s on a lgun o s d e lo s t é r m i n os c o n l o s q ue se

de si gn ab a n a l o s eur o pe os y es pa ño l es e n la e stra ti f icac ió n de las ca sta s de l as


s oc ied ades c o lo n ia le s amer ic an as. Es b ue no rec orda r q ue, en muc has p art es d el
mu nd o, l os a pe l l ido s emp e zar o n e ntre l as e l ite s y só l o si gl o s de sp ués fuer o n ba ja nd o
e n la esc a la s oc ia l h ast a q ue la ge nte o rd i nar i a pud o tene r lo s. En I ng la terr a, l a ge nte
c om ú n só l o e m pe z ó a t e n e r ape l l id os d e s pué s d e l a E d ad Med ia y e n J a pó n s ó lo fue a
f ine s de l s iglo XIX cua nd o se au to rizó a la ge nte ord inar ia te ner a pe llido . L a ge nte
c om ú n e n Ir á n v in o a t e ner a pe l lido s - s e le s o r d e nó q u e l o s t u v ie r a n - e n e l s i g lo
XX. L os d ue ño s de e scl a v os e n e l S ur de E stad os U nid o s a nte s de la g uerr a c iv il
e s t a ba n p a r t icu l a r m e nte o pu e s t os a q u e l os e sc l a vo s t uv i e ra n a pe l li d os p or que
s ubray aban los víncu los f am iliare s y e l ú n ic o v í nc u lo le g a l m e nt e r e c on oc id o q u e
p od ía te ner u n esc lavo er a co n s u due ñ o, q u ie n p od ía ven d e r l o m u y l e jo s d e s u
f am i li a. L os e sc l a vo s m ism os, s in e m b a r g o, u s a b a n a pe ll id os par a crear un se nt id o de
f am i lia, au nq ue te nía n cu id ado de no u sar los e n pre se ncia de los bla nc os. Au n
de sp ués de lo s p roce s os d e i ndepe nde nc ia, l o s n egr os q ue h a b ía n sid o cr i ado s e n la
e sclavitud frecuent eme nte vac ilaban cuand o a lg ú n b l a n c o le s p r e g u n t a ba s u a pe l l id o.
L os l l am ad o s n o mb r e s d e e s cl a vo s q u e t a n t o s n e g ros descend ie nte s de esc l avos
em pe za ro n a re pud iar e n l o s a ñ os 60 en E st ado s U n id os, n i le s fuer o n dad os p or lo s
due ñ os de esclavos ni er an usualmente los ape llid os de los due ñ os de esclavos. Eran
n o m b r e s e s c o g id os pe s e a la s pr o hi bi c io ne s , para simbolizar los la zos familiares que
f recue ntem en te era n más fuerte s que lo s que h ay e n l os guet os negr o s de h oy e n d ía
e n E stad o s Unid os . P ara los nom bre s de los af rode sce nd ientes e n e l Car i be, ve r:
A S CENC I O M I CHELLE, Los n o mb res de l os es cl avo s, y ta mbién CAB RERA, LYDIA, El
Monte, Oc tav a reed ic ió n. Ed ic i o nes U n i ver sa l. M i am i, Fl or ida. 20 0 0.

25 V er: PÉ REZ ANT ON I O, op . cit. P. 1. E l c o nt in en te a mer ica n o c o noc ió un


v i g or os o c r e c im ie nt o d u r a nte e l S ig l o X VI I I. L a p o b la c i ón d e l a Amé r ic a e s p a ñ ol a
c r e c i ó e n u n o s 1 6 m i l l on e s d e ha b it a nte s y s e c a l c u la a f i n d e s ig l o ha b ía e n Amé r i c a
u n os 8 m i llo ne s de ind io s, 4 m i l lo ne s d e mes t i zo s , 3 m i l lo ne s d e b la nc o s c r i o l lo s y
u n m i l l ón d e e s c la v os n e g r os . E l c r e c im ient o d e l a p ob la c i ó n f u e im p or t a nt e e n
c iud ades c om o L A H a ba na y Bu en os A ire s. E n e l c am po pred om in a ba n l o s gra nde s
lat ifund ios y crec ió notableme nte el tr áfic o m e r c a nt i l c o n e l v i e jo m u nd o d e l q u e s e
b en ef ic ia ba l a bur gue sí a c omerc i an te e sp añola y cr iolla de Amér ica. A cambio de
a rt ícu l os i ndu str ia le s, A mér ica pro p orc i o na ba a Eur op a p r oduct os co m o ta bac o,
ca ca o y a zúca r pe ro d uran te e l per iod o ret roced ier o n las expo rt acio nes de or o y plat a
de l Nue vo M u ndo. P ara f ac il i tar e l com erc io co l o n ia l, se cre ó en 17 2 8 l a Co mp añ ía
d e C o m e r c io G u i pu zc oa na d e Caracas, fusionada más tarde p or la d e F i l i p in a s . S e
cre ar on en Amér ica nuevas unive rsidade s, se rea l i za ro n im po rt an tes v ia je s c ien tí f ic os
y t am bi én p r ogre sar o n c o ns ider abl eme nte la I m pre nta y l a Pre ns a. S e c on so l id ó
e nt on ces un a é l ite cul tu ra l que p r om o vi ó e l r e f o r m ism o a me r i ca no . Pe rd idas a
c om ie nz o s de l s ig l o XV II I su s p ose si o ne s e n Eur o pa, E sp aña c ent ró su s e sfue rz o s en
Amér ica, inte nta nd o logr ar u na mayor inte g r a c ió n e c o n óm ic a y a d m i n is t r a t i v a y la
p o l ít ic a d e M a d r id c oi nc id ió c o n u n n ot a ble c rec im ie nt o d e la po b lac ió n cr io lla. Lo s
bl a n cos a me r ic a n os o c r i ol l os c ada ve z menos necesitaban de la administrac i ón ce ntr al
p a r a d e f e nde r s u s pr op ied a d e s f r e nt e a l os i nd ios . S e c a lcu l a q u e e n 1 7 97 p o b la ba n la
A m é r ica e s pa ñ o la u n o s 1 5 m i l lo ne s d e h a b. d e lo s que u na q ui nt a par t e e ra n b la nc os
n ac id os a l lí y se h ab ía n f or mad o e n u n i vers id ades de l c o nt ine nte. Lo s l ídere s c ri o l l os
s e m ost ra ban re ac io s a c o la bo rar co n l a hac ien da rea l y cr it ic ab an fue rteme nte e l
m o no p o li o d e S e v i l la -Cád i z. A pa r e c e n e nt o nces mercados y mercaderes en el Caribe
y S u d a m é r ic a c o n m e j or e s pre c i os q u e l os d e la m e t r ó p o l i, lo q u e hi z o a l o s c r io l l o s
t oma r conc ie nc ia de lo inju st o de l m onopolio, La l ib e rta d c o me r c ial n o s o l o no
a pa c i g u ó l os á n imo s c r io l l o s s i n o q u e l os s o li v ia nt ó a ú n m á s , a e x c e pc ió n d e C u b a ,
ya que la apert ura be ne fic i aba a los c omer c i a n t e s pe n in s u la r e s e n s u s o pe r a c i o nes
c on la s c o l on i as m ás no a lo s ame r ica n os. Una a v alancha de merc ancías , text iles y
a gua rdie nt es c ata lane s in u ndó lo s m ercad os a mer ica n os, e n de tr ime nt o de los
p r oduct os i nd íge na s. E s pa ña pen i ns u la r hu nd ía en el s ubd esa rr o l lo a a lg una s reg i one s
a me r ica na s c o m o la mex ic a n a, per ua na y ar gen t i na, l o que s irvi ó par a, a vivar a ún m ás
e l res e nt i mi ent o c r iol l o c o ntr a la c orte de Madr id. La s cue st i one s eco n óm ica s, de índ o le
s oc ia l y po l ít ic a t e r m i na r ía n po r i nd i s p one r a la p o b la c i ó n m á s i n f l u y e nt e c on s t it u ida
por las é lites cr iollas al surgir pr oyect os c omo el d e la abolic ión de las e nc omiend as
l o que des ag rada ba pr of und ame nte a los terr ate nie ntes mex ica nos y peru anos. El
supuesto propósito de la administración bor b ón i c a d e l a il u s t r a c i ó n e s p a ñ o la e r a
m it ig ar la s d isc ri mi n acio ne s ra ci a les , el im i na ndo fr o nter as e ntre b la nc os y mest i z os,
c os a que tam b ién di sgus ta ba m ucho a l os c r iol l o s. L a p o l ít ic a ref or mis ta de Car l os
I I I h a b ía imp l ic a d o r e d ob l a r e l c o ntr o l s o bre e l g o b ie r n o c o lo n i a l a c os t a d e r e c or t a r
l o s p od e r e s d e l os c r io l l o s . T a m po c o l a Ig les i a perma nec ía i nd ife ren te an te los
c a m b i os i nt r o d u c id os p or e l r e f o r m is m o b or b óni c o e n e l c on t in en te amer ic an o pue s
l e a fe c t a ba l a a c t ua c i ó n d e u n e st ad o que luc ha ba p or limit ar su s p r ivile g i os y s us
i n gre so s. Co m pl ac ien te c o n la c ort e mad r ileñ a, a qu ie n de b ía su p r om oci ó n, l a
j er arqu í a ec le si ást ic a n o p arec í a dar se c uen ta de q ue e l b a jo c ler o t amb ién em pe za ba
a d ist anc iarse de la monar qu ía.

26 E l Congre so de Va le nc ia se reu n ió e n e sa c i udad de l 6 de may o a l 14 de octu bre de

1830, consagró la separació n d e V e n e zue la d e la G ra n Co l om b ia y a pr ob ó u na


C o ns ti tuc i ón q ue e stu vo e n vige nc ia dur an te 27 añ o s. F ue co n vocad o po r dec ret o de l
ge ner a l J osé A n to n io Páe z , e n su c ar ácter de jefe c i v i l y m il it ar de Ve ne zue l a, c o n
f e c h a 1 3 d e e ne r o d e 1 83 0 .
27 La no ve la p ó stu ma d e J osé Mar í a A rgued as, El z o r ro d e a r rib a y e l z o r r o de a ba jo, e s
u n bue n e je m p lo d e e s t e t ip o d e m a n if e st acione s. Ver: ARG UED AS, JOSÉ MARÍA.
El zorro de arriba y el z o rro de abajo. E d it or ia l L o s a d a , B u e n os A i r e s , 1 9 7 1.

28 Es de us o co mún e n la lite ratu ra hist ór ica y e n ciencias polític as hablar de


O l i ga r q u ía -de l gr ieg o o l ig os ( poc os) + a r q u ía (poder) - par a re fer ir se a un a f or m a d e
g o b ie r no do nde s on po co s q uie nes eje rce n e l p od er po l ít ic o. E l té rm i no se ha
u t i l i za d o p a r a d e s c r i b ir l a c om p o s ic i ón d e l os g ob ie r n o s e x c lu s iv o s d e la s é l ite s
d ominantes que han e jerc id o el poder e n d i ver sa s s oc iedades y per íod o s h i st ór ico s.
L os perte nec ie ntes a ta le s é l ite s s on l l amad os Oli g a rcas. Ol igarquía, e n c ien c ia p o l ít ica,
e s e l térm ino que se usa par a r eferir se a u n a forma de g obier no e n que e l poder
supremo está en manos de unas pocas personas. L os escr it ore s polít ic os de la a nt igua
Gre cia emplearon el términ o para designar la f o rma de ge ne ra da de a r i s t o c ra c ia.

29 G ALE AN O, ED UA RDO. L as v e nas ab i e rta s d e A mé r i c a Lat in a, B u e n os A i r e s , 1 9 8 4 y


para la te oría d e la de pende n cia , ver A ndré Gun der Fr an k, ec on om is ta, s oc i ól og o ,
a nt r o p ó lo g o, c ie nt íf ic o s oc i a l, n a c id o e n A le m a n i a , t r a b a j ó e n E s t a d o s Un ido s ,
C a nadá, Amér ic a Lat i na, Á fr ic a y Eu ro pa. En señ ó en Bra si l, y de s pués e n M éxico y
l l e g ó a C h i le e n 1 9 6 8 d onde v i v ió h a s t a 19 7 3, hac ie nd o c la s e s e n l a s e s c u e la s d e
e c o nom í a y s o c i o l og ía d e l a Un i ve r s id ad d e Ch i le . E nt r e s us o br as m á s c o noc id as
f i gur a n: C apit alis mo y s ubd esa r r oll o en A mé r i c a Lat in a ( 1967); Acumulació n mundial 1 4 9 2 -
1 7 8 9, Cris is e n la e c o no mía mu nd ial ( 19 8 0 ) y E l s is t e m a m u ndi a l: ¿ Q u in ie n t os o c i nco
m i l a ñ os ? Du ra nte lar go t iem p o su tr a ba jo te óri c o se c o nce ntr ó e n la te or ía d e l a
de pe ndenc ia y e l ex amen de las re lac ione s ce nt ro - per ifer ia, cue st ion ando e l pa pe l de
la l l amad a b urg uesí a n ac io na l, s ub ord i nada al c a pi t a l e x t ra n jero .

Ve r la c omp l eta bi b l i ogr af ía s um in is trad a e n e l we bs ite c o nstr uid o p or NOR BE RT O


30

RAS: Criollismo y Modernid ad .Un anál is is formal de la id iosincras ia crioll a.


31 P or e je m plo , p a r a e l a nt r o p ól og o f r a nc é s Jacq ues L izot, qu ien ha e stud iad o d ura nte
m u c h o t ie m p o l a c u l t u r a d e lo s i nd í g e na s y an o ma m i, q u ie nes h a b it a n e n l a Am a z o n ía
v e ne zo la n a , l a c ul t u r a y a n o ma m i ser ía u na cultura destruida. Ver: HUIZ I, IS ABEL.
D ib u j o Y a n o m a m i, Cat á log o, Mu se o de Bellas Arte s de Car acas , 2005.
32 C a r lo s M a r x e s c r i b i ó: L as ide as de la cl ase d o min a nt e so n la s i de as d om i nan te s e n ca da

é po ca ; o, d i ch o e n ot r os té r m i no s, la cla se qu e eje r ce el p od e r “ma te r ial” d om i n a nte e n la


s o c ied ad es, al m is mo t iemp o, s u po der “es pi r i tu al” d om i n an te. La cla se que t ie ne a su
d is po s ic i ó n l os me d ios pa ra la p r od u c c ió n m ate r i al disp o ne c o n ello , al m is m o tie mp o, d e l os
m e d i os pa ra l a p r od u cc i ó n e s p i r it ual, l o q u e h a ce que s e l e s o met a n, al p r o pio t ie mp o, p o r
t é rmi n o me d io , l a s i d e a s d e qu i e n e s ca r e c en de l os me d io s n e c e s a r i os p a ra p r od u c ir
es pirit ual me nte. Las ideas dominantes no s o n o t ra c os a q u e l a exp r esi ó n i de al [e n i dea s ] d e l as
rel a ciones mate riales dominantes, l as mismas relaciones mate rial es domi na nte s c on c e b i d a s c om o
i de as; po r ta nt o, l as rel ac i on es q ue h a ce n d e una de te rmi n ad a c lase , l a cl ase do mi n a nt e, o sea,
las ideas de s u dominación . C. MA RX y F . ENGEL S Obras Es cogidas, T. 1. E d it ori a l
P r o g r e s o, Mo s c ú , 1 97 3, p p . 11- 4 4.

33 C f. C arta d e B ol í va r a F ra nc isc o d e P au la S an t a nd e r : S o mos el vil ret o ño del e spañol


p r e da do r , q ue v i n o a A mé ri c a pa r a s a ngr a r l a h as ta t ro n a rl a bl a n ca y pa r a re p rod u c i rs e co n s us
víct imas. Más t a rde, la desce nden c ia i leg ít i ma de est as u n i o ne s se j u nt ó c o n l os d esce nd ie n tes de
l os es clavos traídos de África. Con semej ante mez cla racial y tal es ante ce dente s moral es,
¿ po de m os a cas o pe r m it i r n os p o ne r a l as l e y e s p o r e n ci m a de l os l íd e res y a l os p r i n c ip io s p or
e n c i ma de l os h o mb res ? T ambién ve r las reflex iones de Octavio Paz y E zequie l Mar tínez
Es trad a, e ntre otr os.
34 Ma rta Tra ba y J ua n Acha, s o n d os au tor es c ruc ia le s e n la cr ít ic a y la hi sto r ia d el

a rte e n Lat in o amér ic a. C o n d i fere nte s po stu ras y e n di fere nte s é p oca s, am b os s on
importante s par a c o nocer el desarr ollo ar t íst ic o la tinoame r icano fr ent e a la s
c orr ie nte s no rte amer ican a s y e ur opea s d om ina nte s. Ver e l text o “D os décad as
vulnerables de las artes plásticas latinoamer ic an as ” de Ma rta Tr ab a, e s pecí f ic ame nte
e l c ap ít u lo de l a décad a de l a e ntre ga y lue go, e n e l l i br o “Las cu lt ura s esté tic as de
América Latina” de Juan Ac ha, conf rontar lo que e ste aut or tie ne que decir acerc a de
l a i n va s ió n t e c n ol óg ic a e n t r e 1 9 5 0 -1 97 0 y l a a bs t r a c c i ó n.
35 U n o de los m it os m ás d if und id os de la cu ltu ra i n st ituc i ona l l at in oa mer ic an a es el
de la f or ta le za de i nst it uci o nes c om o, p or e jem p lo , l os mu se os de a rte, cuy as
c o lecc ione s y de sar rollo ha obedec ido a criter ios e ur océntr icos y cuy a moder n izac ión
s e ha vist o r e zag ada dad a la poc a f orma ción d e cu adr os téc nic os y gere nc ia les
ca paces d e em pre nder cam b ios sus tant i vos e n la s m i sma s.
36 E l est udi o de l a ic on ogr af ía en la em b lemá tic a de l os ll amad os p art id os

dem ocr át ic os de Amér ica Lat i na, e n l a s pr imeras déc adas de l siglo veinte e s tare a
p end ie nte de l a hi st or ia de l as arte s v i su a les d e La t in oa mér ica .

37 Acc i ó n Dem ocr át ica en Ve ne zue la y e l AP R A e n e l Pe rú s urg ier o n en l a p r imera

m it ad de l si g l o XX c om o su pue sta s i nte rpr etac i o nes au té nt ica s, i nde pe ndie nt es e


i n é d i t a s d e u na rea l idad i n d oa me r i ca na. Se c o ns ider ab an a sí m is mo s c on i n str ume nt os
p ar a l le va r a c a b o e st r ate g i as d e l uc ha a nt ii m per ia l is t as y pr og rama s d e l u ch a
i n d oa me r i ca n a. A l g u n o s pa r t ido s l a t i no a m e r ic a no s b a s a r on s u i d e a r i o, o r g a n i za c i ó n y
f or mas d e luc ha en plantea mie nt os s im ilares a los de l AP RA y Acc i ón Dem ocr át ica.
A fi na le s del s ig lo XX, a nte la s nueva s for m a s d e e x p a ns i ón d e l i m pe r i a l ism o y la
c om pl e j id a d d e l o s c a m b i o s s oc i o po l í t i c o s e n A mér ica Latin a, e ra e v ide nte que ta le s
c on c e pc i o ne s n o d a ba n l a s r e s pu e s t a s q u e s e nece s ita ba n y e s os p art ido s su fr ier o n
s er ias d i vi s io ne s requ ir ie ndo n ue vas i n ter pret ac i one s de l a re al id ad y r eac om od os
p o l ít ic os que resu l tar o n i n ef icac es an te l os des af í os de la seg und a m it ad de l s ig l o XX
l at i n oame r ica n o. L os ob s o let os e nf oq ue s d e l A P RA, su i nd o ame r ica n is m o y su
s up ue s t a luc h a a nt ii mper ia l i st a, a sí c om o su e sq ue ma d e fre nt e ú nic o d e c l ase s, su
métod o de análisis y e l de safío de confronta c i ón c on e l nue v o m a r c o e s t r a t é g ic o d e l
p od e r d e l os E s t a d o s Un i d o s e n e l c on t ine nt e h a n m a nte n id o t a nt o a l A P RA e n e l
Pe rú c om o A cc ió n Demo crá ti ca e n V ene z uela, prác ticame nte fue ra d e l j u e g o p o lí t i c o
de sde hace casi una década.

38 C f. I nf or m e s o bre D e s ar r o l lo H um an o, U N D P , 2 0 00. L os IDH r e sul t a n d e u n

cá lc ul o in teg rad o de t asa s d e l on ge vi dad, m atr icu la ci ó n en in st it uc io ne s educa t iv as y


nive l de vida.

39 L a s r ad i on ov e la s y t e l e no v e l as m e x ic a n as bas ad a s e n la s h i st or ia s d e C ar id ad B r a v o
A d a m s , m e x i c a na q u e r e s id i ó y la b or ó e n Cu ba du ra nte décad as, tuvieron un espacio
p r i vi le g i a d o e n La novela del aire, a través de la s emisoras habaneras RHC Cadena
A z u l y CMQ R ad io a lo l ar go de 1 7 a ñ os. La t rad ic i ón mex ic an a e n e ste cam p o e s
n o ta b le y la s p r oducc i one s de es te pa í s in und ar on de la l lamad a f ot on o vela a lo s d e m ás
p a íse s l at ino ame ric a no s d e h a bla his pa na . Un a d e l a s f ue n t e s i m po rta nt e s d e l as
t e le n ov e l a s m e x ic a n a s f ueron las historietas o co mi cs , e n es pec ia l aq ue l los a rgum ent os
l l e vad os a l p a pe l p or Y o la nda Var g a s D u lc he desde la déc ada de l 40, cuand o se
e stre na en l a te le v is i ón mex ic an a. De sde 1 96 8, p a s a r o n a l a t e len o ve la p r oc e d e nt e s
de la h i st ori et a pr oducci o ne s com o El rub í, c o n 1 60 c a p ít u l o s t r a ns m it id os y q u e
s up eró la aud ie nc ia de mu ch os pr og rama s e ste la res y otr as c om o Lad ronz uel a, que ya
h a b ía t r a ns i t a d o p or e l c i n e e n 1 9 49 y q u e e n 19 6 6 f u e l le va d a a la t e len o ve la . V e r :
B OR RAT, HÉ CT OR. Des a rrol lo y te ndencias de l as indust rias cult urales e n Amé rica La t i na
y E u ro pa Ib é r i c a: Esp a ci os p úbl i c os , e s t ata l e s y p r i va do s. Cu ltu ra y c omu n icac i ó n s oc ia l:
Amér ica L atina y Eur o pa Ibér ica. III Enc ue n t r o I be r o a m e r ic a n o d e I n ve s t iga d ore s d e
C om u n ic a c ió n . Ce ntr o d e I n ves t ig a c ione s de la Comunicación. Barc elona,
Universidad Autónoma, 1 9 9 4 ; G E T I N O, O C T A V I O. Las i n d us t r ia s c u l t u ra l e s y e l
M e r c o s u r. Revist a Of ic ios T erre stre s, Año 1, Númer o 2. ( s. l.). L a P lat a. F acu lt ad d e
P e r iod i s m o y C om u n ic a c i ó n S oc ia l. U ni ve r s id a d N a c i ona l, 1 9 9 6. ( p p . 1 2 a 17);
C O ST A , CRI ST IA NE. Eu c o m p r o ess a m u j e r. Ro m an c e e c o ns u m o n a s Tele n o vela s b r as ile i ra s
e m e x i c a nas. R i o J a ne ir o, J or g e Z a her E d it or L t d a . , 2 0 0 0.

4 2 L a e r a m od e r na nac e c o n la n oc ió n d e s u b je t i v ida d c om o p r i n c i p i o c o nst r u c t i vo d e

la totalidad. N o obst ante, la sub je tiv i dad e s u n e fect o de l os d is c u rs os o t ex t os e n l os


q ue e st amo s s it uad os. Al h acers e c ar go de lo a nte ri or, se puede e nte nder por qué e l
m u n d o p o s t mo d e r n o se caracte riza por una mult iplicid ad de j ueg os de l e n g uaj e q ue
c om pi te n e ntr e sí , per o de l o s q ue n i n gu no p uede rec lam ar l a leg it im idad def i ni t iv a
de su forma de m ostra r e l m undo. Con l a de sle g it imaci ó n de la r ac io na l idad
t ot al i zad or a p ro cede lo que ha v e nid o e n l l am arse e l f i n de la h ist o ria. L a
p os tm od e r ni dad re ve la que la r a z ó n h a s i d o s ó l o u na n ar r at i va m á s e nt r e o t r as e n la
hist or ia ; u n a gr an nar rat iva, s i n duda, per o u n a de ta nt as. Es ta mos e n pres enc i a de la
mu erte de los met a rrela to s, en l os que la ra zó n y su s u jet o –c om o de ten tad or de l a
unida d y la t otal idad– e sta lla n. S i se m ira con má s de te nim iento, se t rat a de un
movimiento de dec o nstrucc i ón de l co g it o cartesiano y de las utopías de unidad. Aquí
de be su bra ya rse e l irreduc i b le c arácte r l o cal d e t od o d is c ur so , l o que no s i n sta la a l
m a r g e n d e l d is c u r s o d e l a t r a d ic i ón a r t í s tica y est ét ica occ ide ntal. Tal ve z de ahí
p r ove n ga la v i t a l id ad d e lo s e n ge ndr os d e l o s d iscu r so s a r t íst ic os per i fér ic os .
S u b s ist ie r o n, n o o bs t a nt e e n L a t i n oa m é r ic a , e nc la ve s de cu ltu ra c o smo po l i ta en t odo
e l co nt i ne nte, qu e ba j o e l r o pa je de l as v a ng uard ia s as um i ó pa rad ó ji cam ent e, la
c on ser va ción de l o s l ider az go s ar t ísti c os y cu lt ura le s occ ide nt ales tr ad icio n a les. E stas
p o lé m ic a s , d is c u s i one s y d i a t r i bas l le na r o n t od a la pr ime r a m it a d l a h is t o r ia
i n te lectu a l y cu lt ura l del s ig l o XX la ti n oame r ican o y aú n c on t in úa n, por l o que es
b u e no r e c o r d a r q u e : E n u n a c ul t u ra e n u n m o men t o d ad o , n un c a h a y m ás de una sol a
é p isté mè, q ue d e f i n e l as co n d i ci o nes d e p os ib il i dad d e t od o s ab e r. S e a e l q ue s e m a n if i e s t a e n
u n a t e o r ía o a q uel q ue e s t á s il e n ciosame nt e envuelto e n una práctica. Ver : F OU CA ULT,
M I CHE L , Las palabras y las cosas , Gallimard , P a r ís , 1 9 6 6, p. 1 79 .

4 3 I nc lus o la l lamad a “D octr i na Mo n roe ” c o nti e ne e leme nt os de este se nt im ie nto

a nt ie x t ra n jero . F orm u lada p or Jame s M o nr oe, p re sid e nt e d e l os E st ad o s Un ido s


d u r a nte d os per í od os c on s e c u t i vo s ( 1 8 17 - 18 2 0 - 1 82 1 - 1 82 4 ) , e n s u d is c u r s o d e
i n a u g u r a c i ón d e l a s s e s i o ne s d e l C o ngr e s o d e 1 8 2 3, e x pu s o l a t e s is d e l o q u e s e
c on oc e r í a c o m o “ D oct r i n a M o nr oe” , e n r e l a c ió n a l a n o -c o l o n i zac i ón. E s a d oc t r in a
ex pre sa ba que l os c o nt in en tes ameri ca n os e n lo s uces i vo n o de bí a n ser c on s iderad os
c om o s u je t o s d e n i ngu na c o l o ni zac i ó n f u t ur a p or n i ngu na p ot e nc ia e u r o pea . L a
c on secue nc ia má s im p ort an te de dich a doc tr in a f ue la cre ac ió n de l a t eo rí a de l as d os
es fe ras y d e a l l í q u e s e h a b l e d e l a d oc t r i na M on r o e c om o d e l a d oc t r i na d e “ Am é r ic a
p ar a l os amer ic an os ” que im p lic a la noc i ó n de “A mér ica p ar a l os nort amer ic an os ”
q ue e s c om o se aut ode nom ina n los est adounide nse s.

45 La s te or i zaci o ne s s o bre l a s re lac i on es ce nt ro -p er ife ri a se rem o nta n p o r l o


me n os a Wer ne r S om ba rt (D e r mod e r ne K a p i t a l i s m us, 1 9 02 ) , s i n o e s a Ma r x ( la s
re laciones ciudad/ campo) y fue ut ilizada t am b ié n p or l os t e ór ic os d e l i m per ia l is m o
( R os a L u x e m bu r g o , B ou k har i ne) , a s í c o m o t a m b ién p o r l o s e c o n om i s t a s d e la s
de siguald ades de de sarrollo, q u e f u e r o n q u i e ne s l e d ie r on s u f or m a c on t e m p or á nea
( Sam ir Am in , Le dé vel oppeme nt inégal, 1 9 73 ) . Al a i n R e y n a u d d e s a r r o l ló la n oc i ón e n
ge og raf í a (Société, espace e t j us t ice, 1 9 81 ) .

4 5 E l p a n a mer i c a n is m o de fie nde la postura “panameric ana” d esde lo que José Enr ique

Ro dó l l amó " n ord om aní a” . E l p a name r i ca n is m o c u e nt a c o n u na d e c la r a c i ón p ú b l ica ,


o f ic ia l y s o lem ne e n l a d octr i na de M o nr oe. L os e n fo ques de l p a n a me r i ca n is m o parten
d e d os p r inc i pi o s q u e c o n s ide r a i nc o n t r ove r tible s: a) que la conce pc i ón católica e
h i s pá n ica e s u na c o nce pc i ón med ie va l f raca sad a y su pe rad a e n l a h ist or i a y b) q ue l a
c oncepc i ón sajona y protestante const it uye e l n e r v io d e l p o r v e n ir a m e r ic a n o. P or
e l lo , e l p a name r i ca n is m o pre tende la aglutinación de América y s u u n i f i c a c i ó n po l ít ic a y
c u lt ura l c on arr e g lo a la s n orm as e i n st it u c i one s d e l p u e b lo n or t e a m e r i c a n o y c on
d ic ho f i n, l os g o b ie r no s d e l o s E s t a d o s U n id os ha n seg u ido la s polít icas llam ada s de l
" b ig st i k" (Te odo ro R o os ve lt ) y la s de la “ay uda” eco n óm ica y téc nic a ( “A l i an z a p ara
e l Pr ogre s o” e “I n ic iati v a p ara las Amé ric as ”) as í como el apoy o a la cre ac ión y
p erf ecc io nam ie nt o de la Or ga ni z ac ió n de lo s Es tad os Ameri ca n os (OEA ). Inc l us o e l
l l am ado “P la n Co l om b ia ” p uede inc lu ir se de ntr o de la s ini c iat i va s que re su lt an de
e ste en fo que. Ve r: ATK INS G. POPE, ed. The Unit ed St ate s and Lat i n A me rica:
R e d e f i ni n g U.S . pu r po s e s i n the P os t -C o l d Wa r Era , 1 9 9 2. Un i ve r s it y of T e x a s P r e s s ,
A u s t i n. p. 1.
48 La fr o nter a e s pr oc la mada, tam b ié n, c o mo garantía de l derec ho de propiedad -
« est o es m ío , est o e s tuy o »- der ech o que se m arca e n f orm a de p uert as, ba rrer as ,
cer radu ras y ca rte les orde na nd o «Pr o hi b id o p as ar ». La fron ter a f i ja l os l ím ite s de
hasta d ónde se puede llegar, lo «t oler ado» y «adm it id o», los n ive le s est ame nt ar io s de
l a d ifere nc ia e n q ue se fu nda t oda d om in ac ión y de pende nc ia, p or d onde pa san
t amb ié n la s de si gua ld ade s que fu nda n la s d ife re nc ia s y la s i n j ust ic i as de la s cu a les
Amér ica L atina ofrece tant os e jemplos. F r o nt e r a s e c o n óm ic a s y d e s u bde s a r r o l lo ,
f ro nte ra s s oc ia le s y p sic o ló gi cas, l in gü í st ica s, ét n ica s y cu lt ura le s, en tre may or ía s
d om in a n t e s y m i n or ía s s i n p os i b il id a d d e ex pre sar se, pr o lif era n e n un c o nt i nen te
m ar c ad o p or su d i ver sidad y po r la s d e si gua ld ad e s q ue l as a gud i za n h as t a e l l ím it e d e
lo insopo rtable. Ver: M AÑ AC H , J ORGE , Te o ría d e l a f ro n te ra, E d it or ia l U n i ve r s it a r ia
d e P u e r t o Ric o, S a n J u a n, 1 9 7 0, p. 5 5.
49 V e r : A RC AY A, P E D RO M A N UE L. E s t u d io s d e s oc i o lo g í a v ene zo la na. C ar acas :
E d it or ia l C e c i l io A c ost a , 1 9 4 1; C A R RE R A D A M A S , G E R M Á N . L a c r i s i s d e l a
s oc ied ad c ol o n ia l ve nez o l an a. Carac as: G obe r n a c i ón d e l D is t r it o F e d e r a l, 1 97 6;
I RAZ ÁBAL , C A RL OS. V ene zuel a, e scl a va y feud al. Caracas: Ate neo de Car acas,
1 9 8 0; P A RD O, I S A A C J . E s t a t ie r r a d e g r a c ia. 5 ª e d . C a r a c a s : Mo nte Á v i la , 19 8 6;
S I S O, C A RL OS . L a f or m a c i ó n d e l p u e b lo venezo l an o: est ud i os so ci o l óg ic os. 6 ª ed.
M adr id: Pu bl i cad o p or el E scr it or i o Siso, 1982; VALLE NILL A L ANZ, L AURE ANO.
Cesar ismo democr át ic o. 5ª ed. Car acas: Univer s idad Sa nt a Mar í a, 1984, B R ITO
F IG UE R OA, FEDE RIC O . «L a e s t ruc t ura so c ia l y d e m ogr áf ic a d e Ve ne zue l a
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I L DEF ON SO . « L a a ri st o c rac i a c r i oll a y e l c ód igo n e gre r o d e 1 78 9 ». E N: Re v ist a d e
H i s t or ia. C a r a c a s , n ú m . 6 , e ne r o, 1961; MAZA ZABALA , DOMI NGO FELIPE.
« Me s t i za je y e s t r a t if ica c i ó n d e c l a s e s e n V e ne zue la ( 17 8 0 - 1 83 0 ) . E N : Re v is t a
U n i ve r s it a r ia d e H i s t or ia. C a r a c a s , núm . 6, s e p t iem br e -d ic iem br e , 1 9 8 3.
48 R OD Ó, JOSÉ EN RIQ UE. Ariel. E n Ob ra s compl eta s. Editoria l Aguila r, 1957.

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