Portada

El Guaire
Fotografía: César Alvarado

DIRECTORIO

Junta Directiva
S U M A R I O
Jacqueline Faría
Cristóbal Francisco
Eudoro López E D I T O R I A L
Manuel Martínez
Carlos Angarita
Héctor Tello Río maltratado .......................................................... 2
Ernesto Marcano
Florencio Chacón
Rafael Rodríguez
Reinaldo Bravo
C O N E X I Ó N D I R E C T A
Presidenta
Jacqueline Faría
Vicepresidente Ejecutivo Plan Vacacional 2001: diversión garantizada ........ 3
Moisés Benaim
Contralor Interno
Eligio Moreno
Gerente General de Servicios de Administración
y Finanzas
Mireya Riera
Gerente General de Operaciones y Mantenimiento
¿R E C U P E R A R E L R Í O G U A I R E ?
Héctor Gouverneur Entrevista de Dubrawska Aguilar a Eudoro López .............. 4-7
Gerente General (E) de Comercialización
Zurima Morgado
Gerente General de Proyectos y Servicios Técnicos
Marcos Olivares
Consultora Jurídica El saneamiento de El Guaire empezó
Adriana Domínguez en el barrio La Morán .......................................... 8-11
Gerente (E) de Recursos Humanos
Lissette Durán Héctor Gouverneur
Gerente de Informática
Brigitte Santana
Gerente de Imagen
Gerardo Gouverneur
Gerente (E) de Planificación Bajo la lupa ......................................................... 12-13
Rosa Peraza Páginas centrales
Gerente del Sistema Losada Ocumarito
Carlos Ortiz
Gerente del Sistema Litoral Central
Carolina Amundaray
Gerente del Sistema Barlovento «La solución está en los
Simón Ravelli empotramientos cloacales» .............................. 14-16
Gerente del Sistema Metropolitano
Yolanda Pérez Entrevista de Dubrawska Aguilar a Roberto Pérez Lecuna
Gerente (E) del Sistema Fajardo
Héctor Hernández
Gerente (E) del Sistema Panamericano
Manuel Orellana
Mejoramiento de los servicios sanitarios
en los barrios o zonas de desarrollo
no controlado ..................................................... 17-19
Miroslava Faigl M.

H U M O R V Í T R E O 20-21
CONSEJO DE REDACCIÓN
JACQUELINE FARÍA
CRISTÓBAL FRANCISCO
MERCEDES CHACÍN
Producción General
Mercedes Chacín

Colaboraron en este número

Earle Herrera
Roberto Malaver
Dubrawska Aguilar
Héctor Gouverneur
Miroslava Faigl M.
Fotografía
César Alvarado. e-mail: calvarad@cantv.net
Ilustración
Raymond Torres. e-mail: tintero@cantv.net
Infografía F I R M A S
Carlos García Góndolas en el Guaire ............................................ 22
Diseño y producción gráfica
Diana Ovalles Márquez. e-mail: venecia29@hotmail.com Earle Herrera
Fotolito Electrónico
Euroscan Color | EstudiOcé
Jhon Guaire ............................................................. 23
Impreso en Gráficas Acea Roberto Malaver

Depósito Legal: PP199902DF829

ISSN:1317-2263
La Revista de Hidrocapital Año 2 Nro. 8
V E N A P O É T I C A
Sus sugerencias y/o comentarios en la dirección: Vertientes, A la orilla de este río ............................................... 24
avenida Augusto César Sandino, 9na. Transversal, edificio
Hidroven o por el email: mchacin@terra.es Fernando Pessoa
 h
e d i t o r i a l / c r i s t ó b a l
ablar del Guaire es
necesariamente hablar de Caracas. Desde el
punto de vista de la ingeniería, el hecho de
que la ciudad sea un valle cruzado de oeste a
Río maltratado
este por el río, es casi una bendición para el
diseño de los sistemas drenajes y de
recolección de aguas servidas.
Lamentablemente esta ventaja no ha sido
aprovechada en toda su dimensión en lo
referente a los sistemas cloacales, debido a
que la urbe fue desbordada por la ausencia
de planificación y por la presión de las
migraciones de la zonas rurales hacia la
capital, porque no existían políticas de
Estado que garantizaran una ocupación
equilibrada del territorio.
Durante años se improvisaron “viviendas”
y servicios construidos por los ciudadanos en
la búsqueda de sus propias respuestas ante
la conducta autista de los gobiernos del
pasado. Para nadie es un secreto que esta
situación originó la Caracas de hoy. El
saneamiento del río Guaire pasa
necesariamente y en primer lugar por la
incorporación de las zonas de los barrios a
la ciudad formal “a través de un ambicioso
programa de habilitación física que incluya
sustitución de viviendas, construcción de
una trama vial y por supuesto la
rehabilitación, ampliación y mejora de las
redes de acueductos cloacales” (Editorial de
Vertientes N° 5).
2 Vertientes
f r a n c i s c o
La recolección de las aguas residuales es
el paso previo para luego diseñar y construir
los sistemas de tratamiento de estas aguas.
Para ello habrá que robarle espacios a la
ciudad, usar la creatividad y las mejores
mentes de nuestros arquitectos e ingenieros
para resolver el hecho de no haber previsto
lugares para construir las plantas. Quizás en
la Caracas del futuro veamos grandes
viaductos a lo largo de las autopistas
ribereñas del Guaire y bajo de ellas los
sistemas de tratamiento ubicados
espacialmente por subcuencas.
Vertientes propone en su octava edición,
más allá de un ejercicio de imaginación, dar
luces sobre las reales posibilidades del
rescate del Guaire. Para ello consultamos a
los ingenieros Eudoro López y Roberto
Pérez Lecuna, profesionales de dilatas
trayectorias en el área de la ingeniería
hidráulica. Héctor Gouverneur nos relata su
experiencia y pone palabras en un camino
por el cual transitar hacia una solución que
requiere mucho tiempo y voluntad. La
ingeniera Miroslava Faigl destaca la
importancia de resolver el problema de los
barrios como primer paso a la solución
global de saneamiento. Earle Herrera y
Roberto Malaver nos entregan sus
particulares visiones del tema y recurrimos al
bardo portugués más universal, Fernando
Pessoa, para bañarnos en un hermoso río.
La imagen de César Alvarado en Humor Vítreo
nos recuerda a otro símbolo de la ciudad: el
también maltratado Helicoide.
 c o n e x i ó n d i r e c t a

Mucha alegría y diversión ofreció

el Plan Vacacional y el Campamento
Vacacional 2001 de Hidrocapital a
261 niños y adolescentes, quienes
disfrutaron de las actividades recrea-
tivas organizadas durante las vacacio-
nes, para los hijos de las personas
que laboran en la empresa.
Los paseos planificados por la
Organización Halcón, empresa de
recreación ganadora de la licitación
que llevó a cabo el Plan Vacacional
para niños de tres a doce años,
durante dos semanas, visitó sitios
como el Museo de los Niños,
Parque Los Chorros, Parque Dunas
de Valencia, Hacienda El Arroyo,
Baby Zoo, Cine, Parque la Aguada,
Hacienda Santa Teresa, Centro
Deportivo, La Vista Resort, Centro
de Arte La Estancia, Parque Diverci-
ty y el Jardín Botánico.
Para los adolescentes, desde los
doce a los dieciséis años, la organi-
zación IRDESIR realizó un fabuloso Plan Vacacional 2001

Diversión
Campamento Vacacional, durante
una semana a la orilla de la playa y
con excelentes instalaciones. El
Campamento Llanomar, se encuen-
tra cerca de la población de Boca
de Uchire, en el Estado Anzoátegui,

garantizada
el cual estuvo lleno de actividades
recreativas entre ellas: un Rally
Ecológico, Taller de Títeres, elabo-
ración y montaje de obras, juegos
nocturnos, fiesta de disfraces, Taller
de Supervivencia, la gran fogata de
despedida, entre otros.
Finalmente, los participantes de
las actividades realizadas quedaron
muy emocionados y nostálgicos, al
despedirse de sus amigos hasta el
próximo Plan Vacacional.
FOTOGRAFÍAS: HOLGER MICHAEL STORK

Vertientes 3
 ¿Recuperar
4 Vertientes
 Confluencia de los ríos El Valle y Guaire a la altura de Bello Monte

«Esta es la gran pregunta que, en

alguna oportunidad de ese diario
transitar capitalino, nos hemos
planteado los caraqueños en torno a
ese vecino silencioso que acompaña
nuestros recorridos por la ciudad...»

el río
Guaire? Vertientes 5

Eudoro López en la Planta de Tratamiento de Aguas en la UCV
e
sa es la gran pregunta que, en al-
guna oportunidad de ese diario tran-
sitar capitalino, nos hemos plantea-
do los caraqueños en torno a ese ve-
cino silencioso que acompaña nues-
tros recorridos por la ciudad.
Es posible que en alguna de esas
Eudoro López,
¿Recuperar
interminables trancas que se forman
profesor del en Caracas, usted se haya tomado
unos cuantos minutos – de esos que,
Departamento de por lo general, le sobran a los absor-
Ingeniería Sanitaria tos conductores capitalinos -para
pensar en el Río Guaire, aliado de
de la UCV: «Al igual las grandes cloacas y vecino de las
que ha sucedido con principales vías de la ciudad.
otros ríos como el Probablemente esos pensamien-
tos sólo lleguen a su mente cuando
Támesis, el Guaire es la capital es presa de una inclemente
tecnológicamente lluvia que, además de hacer colapsar
posible de recuperar; gran parte de los servicios, alimenta
con litros y litros de agua a este des-
sin embargo, en todos lucido caraqueño.
los programas que se La verdad es que, amén de su olor,
han desarrollado sus posibles crecidas o su fuerte cau-
dal, el Guaire pasa desapercibido
priva el factor para la mayoría de la población, ex-
económico, así como ceptuando aquellos pocos que tuvie-
ron la dicha de disfrutar –seguramen-
la verdadera te a través de fotos- del hermoso pai-
necesidad de saje que este río sano y limpio pro-
hacerlo». ducía en el valle caraqueño.
Esas imágenes son historia, así
como parecieran serlo todos esos pro-
Dubraswka Aguilar yectos emprendidos a lo largo de la
democracia venezolana para recupe-
rarlo. Al respecto comenta Eudoro
López, profesor del Departamento
6 Vertientes
de Ingeniería Sanitaria de la UCV:
“Al igual que ha sucedido con otros
ríos como el Támesis, el Guaire es
tecnológicamente posible de recupe-
rar; sin embargo, en todos los pro-
gramas que se han desarrollado pri-
va el factor económico, así como la
verdadera necesidad de hacerlo”.
Según explica López, la única ra-
zón para recuperar el río sería ante
la posibilidad de que los caraqueños
se quedaran sin agua, lo cual no está
planteado. “Aún cuando cada vez
debemos ir más lejos para encontrar
agua, debido a que los embalses se
han ido secando, no se prevé un de-
sabastecimiento total del líquido en
la capital”, aseguró.
“Frente a la disyuntiva –continúa-
de llevar el líquido a la población o
manejar las aguas servidas, el gobier-
no siempre se orientará por la pri-
mera, debido a que todavía en Vene-
zuela no está totalmente suplido el
servicio de agua potable”.
- ¿Cómo se inicia el problema de
contaminación de este agente flu-
vial?
- El río comienza a contaminarse
desde el mismo momento en que la
ciudad empieza a crecer y la pobla-
ción a requerir agua. Los gobiernos
nos dan el líquido, sin preocuparse
por el destino final que tendría esa
agua ya usada. Lo que vino después
es una rápida deducción: las autori-
dades encontraron en el río la solu-
ción a este problema, sin tomar en
consideración que estarían creando
la cloaca matriz de Caracas.
- Más allá de la cuestión sanita-
ria, existe un serio problema de con-
taminación en su confluencia con
el Tuy.
- Debo aclarar que el Guaire no
es necesariamente un agente conta-
minante del Tuy, ya que, en térmi-
nos de calidad de agua, tan deterio-
rado está uno como el otro. El pro-
blema de contaminación que gene-
ran estos dos ríos radica en que, lue-
go que el Guaire atraviesa Caracas,
pasa por Santa Lucía y Santa Teresa
y se une al río mirandino, desembo-
ca finalmente en Barlovento. Ade-
más de que esto limita el disfrute de
las playas de esta región, también
impide el uso que pudieran darle al
agua los habitantes de las zonas bar-
loventeñas con vocación agrícola.
La complejidad de la contamina-
ción del Guaire es tal que, según lo
expone López, en época de sequía,
más de 90 por ciento del agua que
lleva el río – aproximadamente unos
18 mil litros por segundo - proviene
de cloacas.
- ¿Existe alguna posibilidad de
 «El Guaire es
tecnológicamente
recuperable»
revertir esta situación?
- Hay un principio sanitario se-
gún el cual las cloacas tienen que ser
conducidas a un receptor, llámese río,
quebrada o mar; pero, antes de que
entren en contacto con el receptor
seleccionado, debe mejorarse la cali-
el río
dad de esa agua. Esto es una de las
soluciones básicas a los problemas de
contaminación.
- Es obvio que este principio no
se cumple en Caracas
- En lo absoluto; por ejemplo, el
tratamiento de las aguas municipa-
les – desechadas por la población –
es una responsabilidad del Estado
Guaire?
que, hasta ahora, no ha sido asumi-
da por ningún gobierno. En el caso
de las fábricas, hemos constatado
cómo el sector industrial emplea con
mucha frecuencia las llamadas tube-
rías de bypass, que no son más que
una desviación en el destino final de
las aguas residuales: en lugar de
enviarlas a la planta de tratamiento
que ya tienen instalada, las condu-
cen directamente a los receptores,
situación que sólo es normalizada
cuando se anuncia la visita de un
personero del gobierno.
De acuerdo a lo que explica el
profesor Eudoro López, es cuestión
de conciencia. “A los ciudadanos no
nos queda otra cosa que presionar,
como opinión pública que somos,
para que se tomen las cartas sobre el
asunto”.
«Hidrocapital cumple con la normativa actual»
«Debo aclarar que el Guaire no
es necesariamente un agente
contaminante del Tuy, ya que,
en términos de calidad de
agua, tan deteriorado está
uno como el otro»
«Mas del 80% del agua de El Guaire proviene de cloacas»
- Si alguna vez, un gobierno se
decidiera a recuperar el Güaire, ¿cuál
sería el procedimiento a seguir?
- Buscar una solución macro es
cada día más difícil, especialmente
por el asunto económico. Lo acon-
sejable sería trabajar con soluciones
parciales, es decir, ubicando peque-
ñas plantas de tratamiento a lo largo
del río que vayan saneándolo por
sectores, lo cual sería viable tanto en
inversión como en la facilidad del
manejo de los sistemas.
Es importante hacer notar que si
el agua del río es tratada, puede ser
convertida en agua potable. No obs-
tante, López fue enfático al señalar
que el objetivo final de tratar las
aguas residuales no es el uso huma-
no.
Adicionalmente a los problemas
de contaminación que genera el río,
el mayor peligro que reviste el Guai-
re para los caraqueños está en sus
crecidas y en la posibilidad de que se
desborde. Al respecto, López estima
que el río puede crecer entre 5 y 7
metros por encima de su cauce nor-
mal, en períodos de intensas lluvias.
“En gran medida estas crecidas son
consecuencia de una sencilla ecua-
ción: mientras más se construye,
menos vegetación, menos resistencia
al agua y, por ende, crecidas más rá-
pidas”, acotó.
Calidad del agua caraqueña
Gracias a la actividad diaria que
desempeña al frente de la planta ex-
perimental de tratamiento de agua
de la UCV, Eudoro López garantiza
que las aguas surtidas por Hidroca-
pital son aptas para ser consumidas
directamente. “Las auditorías que
realizamos nos indican que, desde el
punto de vista físico-químico y bac-
teriológico, esta agua es completa-
mente potable, lo que significa que
no hay necesidad de hervirla o em-
plear filtros para su consumo”.
El problema, según lo describe,
está en que las casas y edificios no se
surten directamente de los acueduc-
tos, sino de tanques de almacena-
miento, donde albergan infinidad de
insectos, animales e impurezas.
“En Hidrocapital, explica, se cum-
ple con la normativa actual, según la
cual las aguas que salen de los siste-
mas de tratamiento para surtir a la
población deben tener como máxi-
mo 5 unidades de turbiedad y un
miligramo de cloro por litro”.
Para reafirmar su planteamiento,
subraya que, desde pequeños, sus
hijos consumieron agua directamen-
te del grifo, sin que hayan sufrido
problemas de salud.
Vertientes 7
 El saneamiento de El Guaire
empezó en el barrio La Morán
El Guaire bordea
la autopista
Francisco
Fajardo,
muy cerca
de Caricuao
S
e suele escuchar, por suerte hoy
menos que ayer pero aún con
mucha frecuencia, que la solu-
ción a los problemas de ham-
bre en India se debe a que los hin-
dúes son tontos y que para resolver el
problema “deberían comerse todas
esas vacas”. No es tema de este escri-
to ni las vacas ni las costumbres en
India sin embargo el ejemplo es con-
veniente por la comparación que se
puede hacer cuando el tema no es el
hambre en el mundo sino la contami-
nación de los cuerpos de agua.
En el último caso se escucha decir
en demasiadas ocasiones, que el pro-
blema de contaminación de un lugar
cualquiera se soluciona construyendo
allí una planta de tratamiento.
Es cierto que en muchos lugares
del mundo la solución final a graves
problemas de contaminación, origina-
dos por la actividad humana, ha sido
construir dispositivos que mejoran la
calidad del efluente que debe ser des-
cargado en un cuerpo de agua deter-
minado, con la finalidad de impedir
la disminución de las condiciones de
este último debido a la incorporación
del efluente mencionado.
Es cierto también que, más allá del
tipo de tecnología usada para la me-
8 Vertientes
La presión demográfica jora de calidad mencionada en el pá-
rrafo anterior, los dispositivos señala-
ha traído como dos son denominados comúnmente
consecuencia la plantas de tratamiento.
ocupación de espacios No obstante, el nombre del proce-
so final importa poco y podemos con-
sin ningún tipo de venir en la denominación más exten-
servicio. Esta ocupación, dida, es decir, planta de tratamiento.
Pero lo que si debemos dejar claro es
no pocas veces que el tratamiento de las aguas ne-
estimulada por una gras es la etapa final de un conjunto
irresponsable clase de acciones que de no ser realizadas
apropiadamente, impiden que la
política, ha significado, construcción de una planta de trata-
en lo que a aguas negras miento sea en modo alguno solución
respecta, la ausencia de a muchos de los graves problemas de
contaminación, originados por efluen-
un patrón de recolección tes de origen doméstico. Estas accio-
que permita a los nuevos nes previas son básicamente: la reco-
pobladores seguirlo y, en lección de las aguas negras y su con-
ducción hasta el sitio de tratamiento.
la medida en que lo A lo anterior se debe agregar la pla-
hagan, disminuir la nificación urbana que, desarrollada
adecuadamente, evita el poblamien-
precariedad que el to de sitios en donde la recolección y
servicio de cloacas tiene la conducción se hacen prácticamen-
en estos momentos te imposible debido a los altos costos
que representan.
Héctor Gouverneur Es en este momento que se debe
aclarar que en nuestro país la tarea
inicial, en lo que a evitar la contami-
nación por aguas de origen domésti-
co, ha sido, en gran medida, abando-
nada desde hace muchos años, para-
dójicamente, desde la creación de los
ministerios de Desarrollo Urbano y de
Ambiente y de los Recursos Natura-
les Renovables.
La presión demográfica ha traí-
do como consecuencia la ocupación
de espacios sin ningún tipo de servi-
cio. Esta ocupación, no pocas veces
estimulada por una irresponsable cla-
se política, ha significado, en lo que
a aguas negras respecta, la ausencia
de un patrón de recolección que per-
mita a los nuevos pobladores seguir-
lo y, en la medida en que lo hagan,
disminuir la precariedad que el ser-
vicio de cloacas tiene en estos mo-
mentos.
Pero no sólo ha sido la ocupación
del espacio geográfico por parte de
los pobres lo que ha agudizado el pro-
blema, también ha habido negligen-
cia en los desarrollos urbanos planifi-
cados. Unas veces por ignorancia y
otras por non sanctos motivos de las
autoridades locales, regionales o na-
cionales han permitido la edificación
de urbanismos con ausencia de apro-
piados sistemas de recolección de
aguas negras, a veces hasta de un
«En líneas generales, la
recolección que se realiza en el
barrio la Morán se corresponde
en gran medida a lo que
conocemos como los sistemas de
recolección tradicionales, sólo
que adaptado genialmente a las
condiciones específicas de su
urbanismo»
modo absoluto.
El análisis anterior intenta enfo-
car la solución al problema de conta-
minación en el primer paso, es cier-
to que es sólo el primer paso, pero es
absolutamente cierto que sin el pri-
mer paso el tercero o cuarto son ab-
solutamente inútiles.
Por ello conviene insistir en la re-
colección de las aguas negras, es de-
cir, en construir las obras y los dispo-
sitivos que sirvan para recoger y
transportar desde cada vivienda, des-
de cada inmueble, las aguas servidas
(así llamadas por los ingenieros) has-
ta las cloacas que, a su vez, las con-
ducirán hasta colectores de mayor
tamaño y capacidad y así sucesiva-
mente hasta concentrarlas y, muy
probablemente, descargarlas en una
quebrada o en un río.
Esto último muy probablemente
causará mucha alarma, pero es casi
seguro que al cuerpo de agua recep-
tor llegaran anteriormente la misma
cantidad de contaminantes, con el
agravante de que lo hacían de forma
dispersa, ahora, una vez concentra-
dos, se facilita la tarea de conducir-
los apropiadamente hasta un sitio de
tratamiento. El beneficio de la reco-
lección es que toda la zona situada
aguas arriba del lugar de concentra-
ción quedará saneada con la acción
descrita lo que, adicionalmente a re-
ducir el área contaminada, disminui-
rá sensiblemente la contaminación
por aguas negras de calles y veredas
que como dice un amigo filósofo ru-
ral:
- Eso es lo que enferma carajitos.
En fin, concentrar las aguas ne-
gras para eliminar toda la contami-
nación de las áreas pobladas, aunque
Vertientes 9
 «Conviene insistir en
la recolección de las
aguas negras, es
decir, en construir
las obras y los
dispositivos que
sirvan para recoger
y transportar desde
cada vivienda, desde
cada inmueble, las
aguas servidas hasta
las cloacas que a su
vez las conducirán
hasta colectores de
mayor tamaño y
capacidad y así
sucesivamente hasta
concentrarlas y, muy
probablemente,
descargarlas en una
quebrada o en un
río»

la traslademos aguas abajo, es la ta-
rea que se nos avecina.
De que se puede... se puede
La actividad que se señala es har-
to compleja, sobre todo en las llama-
das Zonas de Desarrollo no Controla-
do, es decir, los barrios. Sin embargo,
de acuerdo a observaciones realizadas
básicamente en el barrio La Morán,
se evidencia que es posible realizar la
recolección de aguas negras en estos
sectores de alta pendiente y de alta
densidad de población.
La experiencia del Barrio La
Morán, en lo concerniente a la reco-
lección de aguas negras es, dicho con
toda responsabilidad, la posibilidad
de lograr el saneamiento del río
Guaire en un plazo tan “breve” que,
si llego a lograr la llamada “expecta-
tiva de vida” del venezolano podré
verlo.
En líneas generales, la recolección
que se realiza en el barrio la Morán
se corresponde en gran medida a lo
que conocemos como los sistemas de
recolección tradicionales, sólo que
adaptado genialmente a las condicio-
nes específicas de su urbanismo.
Pudiese parecer que los habitan-
tes de La Morán son los únicos toca-
dos por la providencia para realizar
la recolección de aguas negras en ba-
rrios con alta pendiente y alta densi-
dad de población, pero esto para nada
es cierto. Actividades similares, evi-
dentemente que adaptándose a las
particularidades de cada localidad,
pueden ser desarrolladas por otros
habitantes de otros barrios.
La capacidad constructiva, la cul-
tura del concreto armado, la osadía,
a veces rayana con la irresponsabili-
dad, hace de los habitantes de nues-
tros barrios a seres humanos con una
capacidad enorme, muchas veces he-
roica, para resolver problemas. Basta
ver las viviendas en lugares de “im-
posible” acceso construidas desde hace
más de 30 años y conducidas en gran
medida por mujeres. Esta capacidad
de resolver problemas hace posible la
negociación en pro del bienestar co-
mún dentro del barrio. Esto significa
convencer a alguien de ceder un es-
pacio de su territorio, para el paso de
un colector o de modificar su sistema
de descarga de aguas negras, obte-
niendo como contraprestación la me-
jora de su calidad de vida, en la me-
dida en que las aguas negras ya no
contaminarán su ámbito inmediato,
sino que serán conducidas hasta la
cloaca “formal” ubicada en la vialidad
de acceso. Lo anterior, que es suma-
mente complicado, se ha realizado y
es posible reproducirlo en otros luga-
res.

10 Vertientes

aguas negras en sectores de alta
pendiente y de alta densidad de
población»
«Pudiese parecer que los
habitantes de La Morán son los
únicos tocados por la providencia
para realizar la recolección de
aguas negras en barrios con alta
pendiente y alta densidad de
población, pero esto para nada es
cierto. Actividades similares,
evidentemente que adaptándose a
las particularidades de cada
localidad, pueden ser
desarrolladas por otros
habitantes de otros barrios»
«Es posible realizar la recolección de
“...Y mientras estemos
realizando la recolección
tendremos tiempo para pensar
en el tratamiento”
Hace poco estuvieron en Venezue-
la los miembros de un equipo técnico
de la Unión Europea, su misión espe-
cífica era verificar la posibilidad de
usar apropiadamente una donación
en metálico para solucionar proble-
mas relacionados con la reconstruc-
ción del Estado Vargas, específicamen-
te con el saneamiento en Catia La
Mar. Ellos conocían las planes y pro-
yectos de lo que podríamos denomi-
nar cloacas tradicionales pero duda-
ban, con todo derecho, de que en los
cerros se pudiera lograr la recolección.
Sin un átomo de duda les menciona-
mos, para su sorpresa, La Morán. Lo
que los impactó inicialmente fue que,
en ningún momento, los habitantes
de La Morán, que poco poseen pero
poco niegan, hayan pedido algo para
sí.
Una vez conocidos los motivos de
la visita se ofrecieron como participan-
tes en las actividades inherentes a la
reconstrucción de Vargas. Posterior-
mente en el “reconocimiento de cam-
po”, sorprendidos aún por lo que ha-
bían podido observar, se “coparon”
cuando una de las dirigentes comu-
nitarias que se había ofrecido como
voluntaria para trabajar en Catia La
Mar le dice, manifestando su disposi-
ción al trabajo, bromeando debido al
conocimiento de lo complejo de la
actividad, disminuyendo ella lo fun-
damental de su participación: - inge-
niero, por fin, ¿cuándo es que nos
vamos a la playa?
Por todo lo expresado ratifico que
es posible el saneamiento del río Guai-
re pero además el saneamiento del río
Guaire pasa por las coordenadas del
Barrio La Morán.
Y mientras estemos realizando la
recolección tendremos tiempo para
pensar en el tratamiento.
Vertientes 11
 El río es atraviesa el valle de Caracas de p

✓ El río Guaire es la
consecuencia de la unión de los
ríos San Pedro y Macarao.

Ba
✓ Su caudal es de aproximadamente 20 mil litros
por segundo.

✓ Tiene más de 100 kilómetros de

longitud, desde su nacimiento hasta su
confluencia con el Tuy.

12 Vertientes
punta a Punta. Es parte del paisaje urbano

✓ El río Valle es uno de sus principales

afluentes y contaminantes del Guaire.

ajo la lupa
✓ Su caída hacia la zona del Encantado, de más de
700 metros, fue aprovechada para construir la
primera planta eléctrica de la Electricidad de
Caracas.

✓ Su embaulamiento se inició hace más de

50 años y se ha mantenido de acuerdo al
crecimiento experimentado por la ciudad.

Vertientes 13
 Roberto Pérez Lecuna, ex Ministro del Ambiente
y de los Recursos Naturales Renovables

«La solución está en los

empotramientos cloacales»

Luego de más de 30
años dedicados al
estudio del recurso
agua, este ingeniero
hidráulico asegura que
la recuperación del río
Guaire no se ha
concretado por falta de
voluntad, dinero y por
ser una obra que
carece de prioridad
para los gobiernos
Dubraswka Aguilar

Caricuao, al fondo,
completa este retrato
inusual de la principal
cloaca de Caracas

14 Vertientes
¿
Es posible creer que en Venezuela se
presenten serios desabastecimientos de
agua, a pesar de que este país cuenta
con 119 plantas de tratamiento mayo-
res, cuya capacidad instalada (147,59
m3) puede dotar a cada habitante
diariamente de 350 litros de agua?
¿Es posible creer que, con esa capaci-
dad, más de 36 millones de habitantes
– cifra que supera la actual tasa pobla-
cional de Venezuela - pudieran contar
regularmente con el servicio de agua?
¿Es lógico pensar que las dificultades
de suministro y el constante despilfa-
rro del líquido reducen las proyeccio-
nes de abastecimiento a sólo 75 por
ciento de la población?
Estas son algunas de las interrogan-
tes que utiliza Roberto Pérez Lecuna,
ex Ministro del Ambiente y los Recur-
sos Naturales Renovables y ex director
de Proyectos y Construcción de Obras
Hidráulicas del antiguo Ministerio de
Obras Públicas y ex Ministro del
Ambiente, para explicar las deficien-
cias en el suministro y distribución de
agua en Venezuela. A partir de ellas
también intenta ahondar en la pasivi-
dad que han tenido las autoridades
nacionales en torno al uso de este
importante recurso natural.
Según comenta, los sistemas de
abastecimiento de agua no son una
prioridad en las políticas administrati-
vas que definen los gobiernos. Ni
hablar, entonces, de las plantas de
tratamiento empleadas en la manipu-
lación de las aguas servidas y en el
saneamiento de importantes ríos como
el Guaire y el Tuy.
La consecuencia de esta última
realidad es un profundo problema de
contaminación en uno de los principa-
les escenarios recreacionales de los
caraqueños como son las playas de
Barlovento y un serio efecto aerosol,
producido en las aguas de estos ríos,
que perjudica a la población.
“Debido al fuerte caudal de estos
afluentes, se forman burbujas en el
agua que, al explotarse, llegan a la
población en forma de virus”, apunta.
- Aún cuando los gobiernos no
actúen directamente frente al proble-
ma, ¿han creado normativas legales
que reglamenten el tratamiento de las
aguas servidas?
- En Venezuela existen muchos
reglamentos en materia de tratamien-
to de aguas, siendo el más importante
la Ley Penal del Ambiente, que esta-
blece serias sanciones para quienes
contaminen las aguas. Sin embargo,
esta ley, así como muchas otras, no se
cumplen en el país.
- Durante su gestión en la admi-
nistración pública, ¿se desarrolló algún
proyecto destinado a tratar las aguas
servidas que caen en el Guaire?
- Mientras fui personero del gobierno,
sólo se repararon las partes del canal del
río que estaban deterioradas. Sin embar-
go, voy a referirme a un programa de
saneamiento diseñado por el Ministerio
de Obras Públicas, conjuntamente con el
INOS, que contemplaba, entre otros
proyectos, la instalación de unas grandes
rejas en la desembocadura del Guaire
con el Tuy, cuya finalidad era retener los
desechos sólidos no biodegradables que
circulan por el río caraqueño. De esta
forma, tratábamos el Guaire aguas abajo
y, a la vez, se saneaba un poco el litoral
mirandino.
- Pero este programa no se orientaba
a recuperar el Guaire como tal
- En primer lugar, déjame explicar
cuáles pudieran ser las razones para
sanear este río. Una de ellas sería
contribuir con la descontaminación de
las playas de Barlovento; y la otra,
emplear esta agua tratada en usos no
humanos, como la extinción de los
incendios forestales. Sin embargo, te
reitero que esto no es una prioridad. No
obstante, si se decidiera sanear el Güaire,
es necesario comenzar por darle uso a los
marginales del río, construidos desde
1940. La función de estos marginales es
recibir todas las cloacas del sector donde
están ubicados y evitar que caigan en el
río.
- ¿Estos trabajos están concluidos?
- Los trabajos de construcción de los
marginales están listos. Lo que hace
falta para que funcionen es construir los
empotramientos cloacales, para lo cual se
requiere voluntad, dinero y tiempo. Esta
obra, además de darle solución al proble-
ma de contaminación del Güaire, consti-
tuiría una fuente de trabajo importante
en estos tiempos.
De acuerdo a lo planteado por Pérez
Lecuna, estos empotramientos se realiza-
rían por sectores de unos 40 kilómetros
aproximadamente. “Son trabajos lentos,
pero que representan la única solución
viable a este problema”, apuntó.
En cuanto al recurso humano que se
necesita para llevar adelante una obra
como ésta, fue enfático en señalar que
“la gente que dirige el sector agua en
este gobierno es absolutamente capaz y
cuenta con la experiencia y las maquina-
rias necesarias para realizarla”.
- ¿Cuál fue la participación del
INOS en el tratamiento de las aguas
servidas que caen al Guaire?
- Este instituto técnico fue creado
básicamente para cumplir funciones de
Vertientes 15

«En primer lugar, déjame explicar
cuáles pudieran ser las razones para
sanear este río. Una de ellas sería
contribuir con la descontaminación
de las playas de Barlovento; y la otra,
emplear esta agua tratada en usos no
humanos, como la extinción de los
incendios forestales. Sin embargo, te
reitero que esto no es una prioridad.
No obstante, si se decidiera sanear el
Guaire, es necesario comenzar por
darle uso a los marginales del río,
construidos desde 1940. La función
de estos marginales es recibir todas
las cloacas del sector donde están
ubicados y evitar que caigan en el
río»
16 Vertientes
«El Guaire siempre
será un drenaje más,
una cuenca muy
grande, muy
intervenida»
abastecimiento de agua y alcantarillado.
El deterioro en su gestión comienza
desde el momento en que no puede
cobrar por el servicio que presta; aparece
así un agudo déficit operativo en sus
arcas que, en la época de la Venezuela
saudita, era subsanado con créditos
adicionales concedidos por el gobierno
de turno.
En este punto Pérez Lecuna hace un
aparte para explicar que el potencial
económico de las empresas hidrológicas
se está disipando frente a la obligación
que les impone el Estado de operar sin
que puedan vender su producto, que no
es otro que el agua tratada.
“El Estado venezolano deja las gran-
des obras de abastecimiento y sanea-
miento en manos de las empresas hidro-
lógicas, las cuales deben asumir los gastos
de ampliación, instalación y reparación
de redes internas, costos energéticos y
personal, entre otros, sin que se les
permita cobrar por estos servicios a
ciertos sectores de la población. Enton-
ces ¿cómo pueden operar? Pues, la
respuesta es que el cobro por estos
trabajos se reparte, en un alto porcentaje,
entre el resto de los usuarios, bajo el
concepto de un impuesto indirecto”,
subrayó.
A su juicio, es necesario capacitar a la
población de menos recursos para que
produzca riquezas, así como crear con-
ciencia en torno a las consecuencias por
el despilfarro de líquido y la violación de
los sistemas de suministro.
Retomando el tema del Guaire, el
ingeniero Pérez agregó ciertos aspectos
que complican aún más la posibilidad de
su saneamiento: “Para poner en marcha
algún programa de recuperación de estas
aguas es necesario tomar en cuenta el
crecimiento experimentado por el caudal
del río que, actualmente, supera los 18
m3/seg en verano. Asimismo, hay que
tomar en consideración que la gota de
agua que cae en forma de lluvia no tiene
tiempo de percolarse, sino que va directo
al río, como consecuencia de la deforesta-
ción; y, en adición a esto, ahora le caen
más aguas servidas a este caudal como
resultado de los desechos de la creciente
población”.
Frente a este panorama nada alenta-
dor, Pérez Lecuna sólo se atreve a asegu-
rar que “el Guaire siempre será un
drenaje más de una cuenca muy grande y
muy intervenida”.

«Para garantizar las obras
de infraestructura es
indispensable la
participación de las
comunidades»
L
a invasión de terrenos públicos o privados tanto en zo-
nas planas como en las laderas de las montañas y, fun-
damentalmente, a lo largo de los ríos y quebradas de las
principales ciudades del país, ha propiciado que gran-
des sectores de la población se encuentren asentados en
conglomerados marginales con graves problemas de sa-
lubridad debido a la carencia de los servicios sanitarios
básicos adecuados de agua potable y saneamiento, rela-
cionados con la disposición final de las aguas servidas y
la recolección de desechos sólidos.
En la mayoría de los casos, los servicios sanitarios en
las zonas de desarrollo no controlado que circundan el
Area Metropolitana de Caracas, han sido construidos por
sus propios habitantes; los diámetros de las tuberías de
acueducto y, cuando los hay, de los colectores de cloacas,
no responden a un diseño hidráulico adecuado, gene-
rando problemas técnicos tales como serias descompen-
saciones a las redes de acueducto con-

Mejoramiento de los servicios

troladas por Hidrocapital e insuficien-
te capacidad de conducción de los sis-

sanitarios en los barrios o zonas

temas de recolección de aguas servi-
das, además de altos volúmenes de
agua no contabilizados debido a innu-

de desarrollo no controlado merables conexiones ilícitas y poca o

ninguna posibilidad de medición y fac-
turación.
Para que el diseño y la construcción de los Por otro lado, la descarga de las
servicios sanitarios de acueductos, cloacas y sos de servidas
aguas en las quebradas y cur-
agua naturales, que aunado a la
drenajes sean ejecutados de manera práctica tan común en nuestro país de
coordinada, con la tecnología apropiada y a convertirlos en receptores de todo tipo
bajos costos, se deberá disponer y consultar de desechos y basuras, producen el la-
mentable aspecto y deterioro ambien-
previamente de los anteproyectos sociales y tal que se observa en nuestro medio
de las propuestas urbanísticas y viales de urbano además de inundaciones y des-
cada barrio bordamientos durante la ocurrencia de
las precipitaciones, debido a las obs-
trucciones que dichos desperdicios cau-
Miroslava Faigl M. san al libre paso de las aguas.
Para cambiar la situación, breve-

Vertientes 17
 «Los diseños hidráulicos
convencionales conllevan en la
mayoría de los casos a obras
costosas que hacen inaccesibles
los servicios de agua potable y
alcantarillados»

18 Vertientes
«Como parte de esta participación
comunitaria se deberán crear en los barrios,
por ejemplo, microempresas locales que sean
responsables de las labores de vigilancia y
mantenimiento menor de los servicios
sanitarios y que sirvan de enlace entre la
comunidad e HIDROCAPITAL para denunciar,
detectar y reparar cuando sea posible las
fugas de agua potable o filtraciones en
colectores de cloacas y drenaje; vigilar que
todas las viviendas se empotren al sistema de
alcantarillado y denunciar a aquellos que
continúen descargando libremente las aguas
negras en las quebradas y arrojando
cualquier tipo de desechos en ellas»
mente descrita en los párrafos ante-
riores, es necesario emprender pla-
nes integrales de mejoramiento y de
incorporación de los barrios a la es-
tructura urbana de la ciudad formal,
los cuales no deben ser entendidos
como de “consolidación de la pobre-
za”, sino como de recuperación y re-
habilitación dentro del concepto de
desarrollo urbano-social y funda-
mentalmente, comunitario sosteni-
ble.
Para que los programas de equi-
pamiento y mejoramiento de barrios
tengan continuidad y sean concebi-
dos de manera integral junto con el
desarrollo urbano de la ciudad, es
imprescindible que se ejecuten algu-
nas acciones en paralelo, principal-
mente, la de limitar el crecimiento
de los barrios. En este sentido, el
Gobierno Nacional debe implemen-
tar operativos que impidan nuevas
invasiones de las zonas verdes y de
protección del Area Metropolitana
de Caracas, así como de cualquier
terreno público o privado, ya que
mientras continúe la formación de
barrios de manera incontrolada y
anárquica en nuestra ciudad capital,
será prácticamente imposible formu-
lar planes de mejoramiento y reha-
bilitación de barrios sustentables.
Para garantizar que las obras de
infraestructura a construir sean via-
bles, factibles y sostenibles, tanto en
su implementación como en su ges-
tión, es indispensable propiciar, es-
timular e impulsar la participación
y la educación comunitaria. De esta
manera, además de garantizar el
mejoramiento del nivel de vida de
los habitantes de los barrios, segu-
ramente se conseguirá un cambio de
actitud, una nueva conducta ciuda-
dana, de responsabilidades compar-
tidas que repercutirá positivamente
en todos los niveles de la sociedad.
Como parte de esta participación
comunitaria se deberán crear en los
barrios, por ejemplo, microempre-
sas locales que sean responsables de
las labores de vigilancia y manteni-
miento menor de los servicios sani-
tarios y que sirvan de enlace entre la
comunidad e HIDROCAPITAL para de-
nunciar, detectar y reparar cuando
sea posible las fugas de agua pota-
ble o filtraciones en colectores de
cloacas y drenaje; vigilar que todas
las viviendas se empotren al sistema
de alcantarillado y denunciar a aque-
llos que continúen descargando li-
bremente las aguas negras en las
quebradas y arrojando cualquier tipo
de desechos en ellas.
También, como complemento de
lo anterior, se deberán emprender
campañas de capacitación para el se-
guimiento de los proyectos técnicos
y de mantenimiento sanitario y am-
biental, así como de educación, re-
flexión y concientización de la co-
munidad, a través de charlas, expo-
siciones fotográficas, funciones de
teatro popular y material escrito,
entre otros.
Para que el diseño y la construc-
ción de los servicios sanitarios de
acueductos, cloacas y drenajes sean
ejecutados de manera coordinada,
con la tecnología apropiada y a ba-
jos costos, se deberá disponer y con-
sultar previamente de los antepro-
yectos sociales y de las propuestas ur-
banísticas y viales de cada barrio con-
templados en el “Plan Sectorial de
Incorporación a la Estructura Urba-
na de las Zonas de Barrios del Area
Metropolitana de Caracas y de la
Región Capital”, elaborado para
MINDUR en 1994.
En este sentido, es oportuno se-
ñalar que además del Plan Sectorial
mencionado anteriormente, en los
últimos años se han realizado valio-
sas experiencias relacionadas con el
mejoramiento y equipamiento de los
barrios en el Area Metropolitana de
Caracas, tales como el de la Funda-
ción para el Desarrollo de la Econo-
mía Popular (FUDEP) y los Consorcios
Catuche y La Morán; el de la Funda-
ción para el Desarrollo de la Comu-
nidad y Fomento Municipal (FUNDA-
COMUN) y su Proyecto de Mejora-
miento Urbano de Barrios (PROMUE-
BA); los planes y anteproyectos urba-
nos elaborados para Catuche, La Sil-
sa, La Morán y La Vega; los proyec-
tos de saneamiento del Río Catuche
y de un sector del barrio La Morán,
entre otros.
Como parte de este esfuerzo, en
1999 fue elaborado para HIDROCAPI-
TAL un “Manual de procedimientos
para la ejecución de mejoras en los
servicios públicos de acueductos y
alcantarillados en zonas de barrios”,
en el cual se presenta un conjunto
de sugerencias, recomendaciones y
procedimientos técnicos para diseñar
los servicios sanitarios de abasteci-
miento de agua potable, recolección
y disposición final de las aguas servi-
das y el mantenimiento y encauza-
miento de los drenajes naturales,
acordes con la realidad física y topo-
gráfica de los barrios, a fin de dismi-
nuir las inversiones necesarias para
su construcción y lograr que sean eje-
cutados, operados y mantenidos por
sus propios usuarios, dentro de un
ambiente de participación y coope-
ración vecinal.
Los diseños hidráulicos conven-
cionales, siguiendo la normativa vi-
gente, conllevan en la mayoría de los
casos, a obras costosas que hacen in-
accesibles los servicios de agua pota-
ble y alcantarillado en los barrios.
Por ejemplo, por qué y para qué
mantener una profundidad mínima
de 1,15 m por encima del lomo de
un colector de cloacas ubicado en una
vereda peatonal de un barrio, si no
hay posibilidad de que circulen ve-
hículos? Por qué usar bocas de visita
convencionales, si una tanquilla de
concreto puede cumplir con la mis-
ma función?
Comenzando el siglo XXI, el pa-
radigma técnico tiene que ser diná-
mico e innovador. Con otros criterios
técnicos, que por supuesto tomen en
cuenta las características particulares
de cada barrio, con otras técnicas y
otros materiales diferentes a los usa-
dos tradicionalmente, los sistemas de
abastecimiento y alcantarillado a pro-
yectar en los sectores de los barrios
donde no exista vialidad de acceso,
podrán funcionar igual o mejor que
los diseñados siguiendo la normati-
va vigente y, fundamentalmente, sus
habitantes podrán tener acceso a
ellos porque las inversiones a reali-
zar serán considerablemente meno-
res.
Vertientes 19
 h u m o r v í t r e o

Caracol dormido
En los años 50 del siglo pasado ya los venezolanos
teníamos en proyecto nuestro mall particular. La
singular estructura, un gran centro comercial, fue
ideada por el arquitecto Jorge Romero Gutiérrez, y
secundada por los también arquitectos Dirk Bornhorst
y Pedro Neuberger. Con sus bancos, sus áreas verdes,
sus tiendas, su multicinema, sus locales de
exposiciones. Pero no fue así. Cuando empezaron a
trabajar en El Helicoide no existían antecedentes en la
arquitectura clásica del uso de las rampas helicoidales.
La más parecida era la forma piramidal utilizada por
los egipcios, pero esta era en realidad una masa inerte.
El Helicoide en cambio era una pirámide dinámica,
formada por dos espirales concéntricos. Una especie
de tornillo gigante que gira y se levanta hacia el
espacio. Neuberger y Bornhorst niegan que haya sido
una obra del ya muerto dictador Marcos Pérez
Jiménez. El gobierno perezjimenista no metió una
locha en su construcción, contrario a lo que muchos
han pensado por años. El Helicoide no es una obra del
dictador. Fue una iniciativa privada, abortada, eso sí,
por la caída del tirano. En uno que otro quinquenio se
oyeron ideas para echar a andar el caracol de concreto.
Pero hasta ahora el gigante sigue en coma profundo.
1950 Superficie total 101.940 metros cuadrados. Vías y espacios ver-
des 29.192 metros cuadros. 72.748 m2 dedicados a construc-
ción de los cuales 46.715 serían locales comerciales y exposición
de industrias. 8.445 metros cuadrados para bienes comunes,
17.588 para la construcción de entrepisos o mezzaninas en los
locales de comercio, 17 mil metros cuadrados para estaciona-
mientos y aceras cubiertas. 30 mil metros cuadrados de jardines
irían esculpidos en la roca.
1959 Esta es una de las creaciones más exquisitas del mundo, dijo el
poeta Neruda. Dalí manifestó su deseo de participar en la
decoración.
1985 La cúpula se convierte en sede de la Disip.
1993 Centro ambiental, sede del Ministerio del Ambiente y
Cartografía Nacional
1999 Albergue de los niños de la calle
2001 ?
Fuente: Archivo de elnacional.com

Aviso
Pavco

20 Vertientes
Vertientes 21
 e a r l e h e r
Góndolas en el Guaire
NO ES UTÓPICO IMAGINAR el día en
que los caraqueños puedan agregar
a sus atardeceres el paseo en
góndola por el cristal del Guaire.
Algo nos une a Venecia desde los
días fundacionales en que el
conquistador nos bautizó, como
país, precisamente con el nombre
de Pequeña Venecia. Después, para
que los hermanos argentinos no
nos llamaran echones, nos desem-
barazamos del toponímico europei-
zante y decidimos ser, criolla y
simplemente, Venezuela.
Nombre éste que nos facilitó
identificar el gentilicio con nues-
tras empresas primordiales y, por
qué no, con uno que otro presiden-
te: Maraven, Corpoven, locoven,
etc.
El Guaire fue en otros tiempos
un río de encanto, inspiración de
poetas, balneario de próceres y
doncellas, «camino que anda» de
los primeros habitantes, lugar de
encuentros y citas en los crepúscu-
los coloniales, vena y vida del valle
de los indios Caracas. No sé si
nuestro primer historiador, don
José de Oviedo y Baños, llegó a
bañarse en sus aguas, pero de que
éstas lo cautivaron no queda
ninguna duda. Por eso sublimó su
prosa para cantarle a su eterna
primavera y, al referirse al valle del
Guaire, destaca en su historia de la
Provincia de Venezuela, que era
«llamado así entre los indios, por
un hermoso río de este nombre,
que cortándolo (al valle) de Po-
niente a Oriente, lo atraviesa con
sus corrientes, y fecunda con sus
aguas».
Ese Guaire remoto, ese río que
perdimos, es una nostalgia perma-
nente y la recóndita ilusión de que
algún día lo podremos recuperar.
Entonces soñamos con los vesperti-
nos paseos en góndolas multicolo-
res. Pensamos que un margariteño
italianizado, Roberto Malaver,
quien cambió las catalanas por los
macarrones desde que una familia
de Nápoles abajo lo adoptó, bien
podría entrenar a los futuros
gondoleros. Para que la utopía sea
posible, primero hay que desconta-
minar el río y devolverle su anti-
quísimo espejo, su encanto primi-
genio. Para lograrlo, vaya el
siguiente cuerpo de proposiciones:
1) Que el alcalde Peña importe
a un superpolicía del ambiente,
una suerte de mister Bratton
ecológico, que se encargue de
22 Vertientes
r e r a
limpiar al río, como su par policial «El Guaire fue en otros
asegura que limpió de choros a
Catia y ahora le va a entrar a los tiempos un río de encanto,
barrios de Petare. Un tipo que dejó
a Caracas libre de choros, puede inspiración de poetas,
hacer cualquier cosa. balneario de próceres y
2) Crear el ISCH, esto es,
impuesto sobre la cochinada, doncellas, «camino que
mediante el cual el Seniat pechará
a personas y empresas que ensu- anda» de los primeros
cian y contaminan al río. La habitantes, lugar de
recaudación será de tal proporción
que permitirá contratar la más encuentros y citas en los
moderna tecnología para dejar al
Guaire como el Támesis, listo para
crepúsculos coloniales,
que Roberto y sus gondoleros vena y vida del valle de los
arranquen.
3) Incluir en el COPP un indios Caracas. No sé si
artículo que establezca la limpieza nuestro primer
del río como servicio comunitario
obligatorio para todo delincuente historiador, don José de
de cuello sucio o blanco. Este
servicio también debe cumplirlo Oviedo y Baños, llegó a
todo político que aspire a ser bañarse en sus aguas,
diputado, concejal o miembro de
junta parroquial por la ciudad de pero de que éstas lo
Caracas, así como a ocupar cual-
quier puesto público en la capital. cautivaron no queda
4) Repetir todas las ninguna duda»
anteriores por reinci-
dencia.
Como se ve, se trata
de proposiciones simples
y viables y de soluciones
sencillas. No son nada del
otro mundo. Limpio el río,
recuperado su cauce,
orgulloso otra vez el Guaire
de ser lo que una vez fue,
lo demás es buscar pareja y
viajar en góndola de
oriente a poniente del valle,
como dijo don Oviedo de
Baños. La ciudad se haría
más romántica y, de paso, hasta
el metro se descongestionaría.
Como para entonces el Sherlock
Holmes o la Agatha Christie
de Peña habrán reducido a
menos de cero la delincuen-
cia, no habrá ningún tipo de
peligro de que a nadie le
roben la góndola, o lo que es
peor, los remos.
 r o b e r t o m a l
Jhon Guaire
JUAN ARIAS ERA UNO DE LAS MALANDROS
más detestados del barrio El Obser-
vatorio. Tenía todo tipo de armas.
Manejaba un machito y prácticamen-
te volaba. Su banda crecía de repen-
te - eran veinte chamos- y más tarde
se caía -menos de diez-.
Violaba niñas y atracaba ancianos.
Cobraba peaje y fumaba marihuana
en la escalera del barrio. Disparaba
al cielo para celebrar cualquier cosa.
No tenía hijos, pero sabía que cuan-
do quisiera tenerlos tenía a su dispo-
sición cualquier chama del barrio.
Una noche, cuando había robado
el maletín de un importante ejecuti-
vo de la industria petrolera, Juan
corría velozmente en su machito. A
la policía le pareció sospechoso ese
machito que volaba por la carretera
y empezó a seguirlo. Juan se dio cuen-
ta de que tenía detrás - pegada como
una garrapata- una patrulla de la me-
tropolitana, y aceleró. Y cuando fue
a tomar la curva cerca de la UCV para
entrar en la autopista, el machito se
fue de lado y Juan fue a dar con todo
su orgullo al Río Guaire.
Logró escaparse. Nadie sabe
a v e r
cómo, Juan Arias desapareció del lu-
gar en donde había caído. Los bom-
beros lograron sacar el machito y
buscaron por todas partes “el cadá-
ver del delincuente que huía después
de robar el maletín de un importan-
te ejecutivo de la industria petrolera”.
Lo dieron por muerto.
Pero Juan logró llegar al Obser-
vatorio. Todo sucio. Hediondo. Cuan-
do los amigos de su banda lo vieron,
lo saludaron desde lejos, porque na-
die se le podía acercar por aquel olor
a excremento que llevaba encima.
Fue entonces, cuando todos en el
barrio se enteraron por la televisión
y la prensa, de que un delincuente
había caído en el Río Guaire cuando
venía huyendo de la policía. Las cá-
maras mostraron el machito, - el ca-
rro de Juan- y en la prensa salió la
foto del carro. Y por ninguna parte
aparecía el cadáver del delincuente.
- Un grupo de caraqueños se arre-
molinó en el lugar de los hechos -de-
cía el locutor de un noticiero- para
ver cómo el cuerpo de bomberos sa-
caba del Río Guaire al vehículo,
mientras el cuerpo del delincuente
Y fue justo en ese
momento cuando Juan
Arias entendió las risitas
cuando pasaba. Los
murmullos. Las caras de
felicidad cuando él se
alejaba y comentaban algo.
Entonces lo supo. Todos lo
llamaban así: Jhon Guaire.
no apareció por ningún lado.
- Creemos que debe estar muer-
to, y que seguramente el río dejará
su cadáver en cualquier parte de la
ciudad.- decía un bombero a una jo-
ven y bella periodista.
Todo el barrio lo supo:
- Ese fue Juan. Ese es su carro. -
gritaba la gente del barrio.
Fue entonces cuando entre todos
empezaron a llamarlo Jhon Guaire.
Cuando lo veían venir murmura-
ban:
- Allá viene Jhon Guaire.
- Mosca, que no te escuche que le
dices así, porque te mata.
- Allá va Jhon Guaire.
Pasaba el tiempo y Juan Arias se-
guía cometiendo fechorías pero sin
saber que secretamente todo el mun-
do en el barrio se burlaba de él lla-
mándolo Jhon Guaire.
Fue en la fiesta de los cinco años
del chamo Luisito García, donde ocu-
rrió la tragedia. Cuando ya habían
tumbado la piñata y padres y niños
celebraban el bonche, llegó Juan
Arias. El chamo Luisito lo vio y dio
un grito.
- Papá. Llegó Jhon Guaire.
Y fue justo en ese momento cuan-
do Juan Arias entendió las risitas
cuando pasaba. Los murmullos. Las
caras de felicidad cuando él se aleja-
ba y comentaban algo. Entonces lo
supo. Todos lo llamaban así: Jhon
Guaire.
El hombre sacó una granada y la
lanzó. La granada estalló en el me-
dio de la fiesta. Sacó una de sus ame-
tralladoras y disparó durante cinco
minutos. Al final, sólo estaba él en el
medio del salón.
Al día siguiente, uno de los perió-
dicos tituló: LA BALADA DE JHON GUAI-
RE.
Y luego contaba la historia que co-
menzó un día que Juan Arias, después
de robar el maletín de un importan-
te ejecutivo de la industria petrolera,
cayó con su carro en el Río Guaire...
Vertientes 23
 v e n a p o é t i c a

Río San Pedro, origen del río Guaire

A la orilla de este río,

o cualquier río que sea,
va pasando el tiempo mío.

Nada me ata, me espolea

ni me da calor o frío.

Lo que hace el río voy viendo

cuando el río no hace nada.
Los rastros que va trayendo
veo, en secuencia arrastrada,
de lo que atrás queda siendo.

Voy viendo y voy meditando

y no en el río que fluye,
sino en lo que estoy pensando,
pues me hace bien porque huye
sin que lo vea pasando.

Voy a la orilla del río

que se encuentra aquí o allí,
y de su curso me fío,
pues, si lo vi o no lo vi,
él pasa mientras confío.

DEL CANCIONERO
(1909-1935) DE FERNANDO PESSOA

24 Vertientes