Jeferson Rivera 2016-0964

Chile

La ciudad de Santiago de Chile está localizada en el centro de una cuenca

ambiental, que constituye uno de los sistemas territoriales más complejos y

completos, e implica un conjunto de restricciones necesarias a tener en

cuenta al planificar de manera sustentable el desarrollo urbano metropolitano.

Esta ciudad poseía diversas características que la colocaban como una

opción eficaz para comenzar a realizar un plan de desarrollo urbano para la

ciudad, de una manera u otra, en la ciudad existían muchas dificultades en la

coordinación que se supone debían mantener las metrópolis.

La ciudad tenia un problema muy común en otras ciudades: la centralización

urbana, que hace que tanto el movimiento urbano, los recursos, la política y

uso de suelo sean muy difíciles de manejar, no solo para los organismos

sociales y políticos, sino también para el urbanismo.

Con estas propuestas el principal objetivo era la recuperación de la identidad

comunal a partir de las fronteras, definir claramente los limites de la ciudad

para logar descongestionar las zonas neurálgicas de la ciudad.

Para poder determinar esto se comenzó a realizar un estudio a la misma

ciudad y a las ciudades cercanas. Uno de los datos principales que determinó

el impulso de un plan de desarrollo urbano fue el significativo aumento de la

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población que provocó el daño del plan urbanístico que poseía la ciudad.

Debido a este aumento de población el uso de suelo determinado se vio

afectado ya que muchas zonas residenciales se convirtieron en zonas mixtas

donde se introdujo el comercio.

Con esto, se decidió dividir la ciudad en cuatro zonas claramente

diferenciadas: Zonas de industrias peligrosas fuer del área urbana; Zonas

industriales intercomunales; Zonas mixtas con industrias existes y otras en

desarrollo y áreas residenciales.

Con esto logra definir limites claros y puntos fronterizos donde claramente las

zonas están divididas, se delimitaron las áreas residenciales de las

protegidas, establecer vías de conexión donde se relacionan cada una de las

zonas y definir las áreas especiales y los factores que acotaron la imagen-

objetivo de Santiago son dados como focalización, secuencialidad y

fragmentación.

Otra solución que se realizó fue la creación de ciudades satélites. Con a

estas ciudades se buscaba el descongestiomiento de la zona urbana y así el

centro urbano de la ciudad de Santiago.

En la planificación para Santiago analizada, se programó un sistema de

satélites (residenciales, agrícolas, industriales y de recreación) distribuidos

dentro de la microregión metropolitana, en radios de 15, 30 y 45 Km. de

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distancia del núcleo principal, con diversos grados de comunicación y

autonomía relativa.

Con el estudio de la ciudad de Santiago de Chile podemos tener una

perspectiva diferente de cómo el urbanismo ha transformado y mejorado el

desarrollo de muchas ciudades a nivel mundial. Con esto, hay una clara

diferencia entre las ciudades planificadas y las que no han sido planificadas,

además, de cómo el comportamiento y los servicios funcionan de una mejor

manera cuando se planifica una ciudad. Chile es un gran ejemplo ya que

constituye uno de los sistemas territoriales más complejos y completos

dándole importancia al hombre como ente que se desarrolla en la ciudad.