Título: La Línea Que Separa El Mal Del Bien.

Introducción: De acuerdo con los recursos y medios educativos que me asignaron en

esta actividad en la lectura del primer capítulo del efecto Lucifer, y de los Resolución de
Conflictos en el siglo XXI, comprenderemos los Conflictos emocionales de las personas con
el criterio de por qué cambiamos ante una situación extrema. La historia del hombre ha estado
ligada a la reflexión acerca de sus actos, siendo la Paz, la Guerra y por lo tanto el Conflicto.
La Lectura nos muestra la verdad de nuestras vidas, el mundo está lleno del Bien, De Bondad,
De Amor también está lleno de Maldad y siempre ha existido esta lucha de contrarios
atacando el cerebro y los sentimientos de todos los seres humanos. El objetivo de mi sentir
está en la de comprender las transformaciones que tienen las personas buenas o malas cuando
hacen algo malo en la vida cotidiana. ¿Sabemos de qué seríamos capaces en una situación
extrema a la que nunca nos hubiéramos enfrentado? ¿Somos realmente quién creemos que
somos? El psicólogo Philip Zambardo quiso ver qué sucedía si se colocaba a gente buena en
un lugar malvado. En 1971 el experimento de la prisión de Stanford se le fue de las manos
y tuvo que ser interrumpido a los pocos seis días de empezar, sin embargo, bastó para ser
mundialmente famoso y para demostrar lo mucho que el entorno puede cambiar a las
personas.

Todos estos temas nos hacen reflexionar sobre la naturaleza humana, algunos
nacemos con la capacidad de ser buenos o malos, afectuosos o indiferentes, creativos o
destructivos. En los conflictos contemporáneos (Caso Masacre de Trujillo) no aplicó normas
y todo vale: mutilación de civiles, violaciones masivas de mujeres, ejecución de prisioneros,
saqueo, utilización de minas antipersonal y, en suma, todo lo que provoque terror en la
población civil, que es la principal víctima.

Esta deshumanización de los conflictos va acompañada del saqueo de los recursos

naturales de regiones ricas en materias primas y minerales estratégicos, que sirven para
alimentar la guerra al ser el sustento de los grupos armados y el mecanismo por el cual
intercambian riquezas naturales por armas, en un círculo infernal en el que intervienen
empresas transnacionales que se benefician del descontrol sobre esas regiones y de la
ausencia de un Estado regulador. Estos conflictos constituyen una rara excepción, que se
encuentran en el lado oscuro de la línea que separa el mal del bien, un ejemplo claro de esto
sucedió con la masacre de Trujillo en donde las mismas autoridades que se suponían que
estaban en ese lugar para cuidar a la población, terminaron Abusando de su Poder para
cometer semejante barbarie que marcó para siempre las vidas de las familias que resultaron
victimas en este Conflicto en donde murieron muchas personas inocentes, provocando un
grave impacto en el territorio y la seguridad humana vinculados con la autodeterminación y
autogobierno. Se evidencia también asesinatos colectivos, torturas, masacres, terrorismo
entre otros actos delictivos que fueron cometidos por una alianza entre los narcotraficantes
Diego Montoya y Henry Loaiza, junto a los miembros de la Fuerza Armada Colombiana en
este sector del País. Lo más probable es que esas personas se hayan dejado llevar por las
Alteraciones Negativas (Maldad) y no tuvieron un control de ellas, como sucedió en el
experimento de 1961 de Stanley Milgram, el experimento demostró que desde pequeños se
nos enseña a obedecer a la autoridad y normalmente la autoridad es buena, los padres, el cura,
el rabino pero no sabemos qué hacer cuando alguien bueno se vuelve malo, cuando un
profesor es inhumano, con los estudiantes o un padre abusa de sus hijos y Milgram demostró
que la mayoría de las personas podían cruzar fácilmente la línea que separa el bien del mal
con buenas intenciones e influyendo los factores generados por una orden o situación donde
no había una lógica en sus apreciaciones de lo correcto y lo incorrecto.

De esta manera nos damos cuenta que los conflictos se dan por aquellas personas que
se dejan llevar por un impulso negativo, de maldad haciendo cosas que solo le convienen a
él sin importarle los demás seres que lo rodean.

¿Pero que hace que una persona cambie de repente de un estado normal a uno
conflictivo? en mi pensar es lo más posible que sea la circunstancia o el medio en que vive y
si está rodeado de un ambiente conflictivo su mente solo podrá recibir y grabar en su cerebro
todo lo negativo que está viviendo, como habremos personas también que dada las
circunstancias somos fuertes y no nos dejamos influenciar de todo aquellos que van en contra
de nuestros principios y valores. También vemos que la misma sociedad es decir las personas
que hacen las leyes para que las cumplas son las que más hacen caso omiso y las incumplen
utilizando su poder de mando. La maldad no tiene límite y estas personas que abusan de su
poder pasan sobre las demás personas de menos poder deliberadamente dañándolas,
maltratándola humillándolas hasta destruir gente inocente.
 ¿Cuál es aprendizaje obtenido en la elaboración del artículo?

El conflicto ha sido abordado para comprender cómo este se da en una sociedad,

cuál es su papel en las relaciones sociales, políticas y económicas de un estado, pero me doy
cuenta después de leer, que todos podemos caer dentro de este fenómeno llamado El Efecto
Lucifer, no estamos lejos de hacer el mal, como tampoco lo estamos de hacer el bien. Como
Persona puedo pensar que estoy lejos de convertirme en un tipo que de alguna u otra forma
obre mal.

CONCLUSION

Podemos ultimar que las emociones saltan dependiendo de las circunstancias y se

transforman en positivas o negativas y que muchas personas se dejan influenciar de esta para
obtener algo para su conveniencia, las exposiciones psicológicas y demás sucesos relatados
en el libro El efecto lucifer tuvieron una trascendencia emocional para las personas que
estuvieron y vivieron esos momentos conflictivos. La forma de reaccionar de los seres
humanos ante las situaciones difíciles desencadena conflictos, motivados por el poder, por
unos fines elevados, por la mejor de las ideologías.

Y también se puede con concluir que eso mismo se puede trasladar a otras prisiones
que nos imponemos a nosotros mismos como la timidez, los prejuicios, la vergüenza, el
miedo y el poder actuar de manera consciente y crítica.