Defending the nation and seeking riches:

merchants and privateers of Chile, 1817-1831.

Francisco Betancourt-Castillo.
Dr.(c) in history, University of Chile.

Abstract:
The process of Independence in Latin America was characterized by permanent
warfare, which was especially evident on the high seas, between the newly formed
States and forces loyal to the Spanish King. Loyalist forces operated in a wide
geographical space, either from the Viceroyalties of Peru and Cuba or through the
action of contracted vessels, which allowed them to involve almost the entire
American continent and the Atlantic and Pacific Oceans. Faced with this continued
threat in the high seas, and at the same time in order to defend the feeble
independence that had been achieved with so much effort on land, the newly
formed States allowed and encouraged the activities of privateers. These activities
allowed the governments to secure their seas, and to help the newly formed
national navies in the difficult task of harassing the enemy. In addition, this
activity allowed for the removal of a very important threat, which in many
occasions endangered the international merchandise trade, considered vital for the
good progress of the internal markets and the Public Treasury, in short, of the
"national" economy.

Regarding the above mentioned, the Chilean case was not an exception. This
maritime activity, sponsored or permitted by the new State, represented at the
same time, for many traders established in Chile, a new and unique business
opportunity. In the context of continuous and intermittent war, the option of
privateering became a new undertaking for those who aspired to intervene and
advance in the merchandise trade. At the same time, it meant a business
opportunity that was not by its nature exclusive, in that it allowed for
diversification, taking into account the traditional inter-regional or terrestrial trade,
the "peaceful" shipping activity, as well as, in some cases, contracts with the State.
These corsairs were able to obtain, by means of force, unexpected revenues from
the dismal "Spanish" trade with the peninsula: that of its competitors who were on
the other side of the armed conflict, loyal to the Iberian king. This article will show
the development of these types of business dealings within the Chilean
independence, by deepening the analysis of some cases that happened during the
first decades of the 19th century. In those years the apogee of this type of activity
occurred, along with the consolidation of the Independence and the later
construction of the Republic State.
Key Words: Independence of Chile; Privateers; Merchants; Colonial trade;
Navigation.
Resumen:
Los procesos de independencia de Hispanoamérica se caracterizaron por una
situación de guerra permanente, que se desarrolló especialmente en los mares, de
modo que los nuevos Estados tenían que oponerse a las fuerzas leales del rey
español. Tanto desde el virreinato de Perú como desde Cuba, o mediante la acción
de buques contratados, las fuerzas realistas operaron en un amplio espacio
geográfico, que involucró a casi todo el continente americano, tanto en el Océano
Atlántico como en el Pacífico. Ante esta continua amenaza en los mares y para
defender la débil independencia que con tanto esfuerzo se estaba logrando en
tierra, los nuevos Estados permitieron y alentaron las actividades de los corsarios.
Esta actividad permitió a los gobiernos asegurar sus mares y ayudar a las nuevas
armadas nacionales en la difícil tarea de hostigar al enemigo. Además, esta
actividad permitió eliminar una amenaza muy importante, que en muchas
ocasiones puso en peligro el comercio internacional de mercancías, considerado
vital para el buen progreso de los mercados internos y del Tesoro Público, en
resumen, de la economía "nacional".
El caso chileno no fue una excepción respecto a lo antes dicho. Esta actividad en el
mar, patrocinada o permitida por el nuevo Estado, representó al mismo tiempo,
para muchos comerciantes establecidos en Chile, una oportunidad de negocios
nueva y particular. En un contexto de guerra continua e intermitente, la opción
para el corsario se convirtió en una nueva forma de emprender para aquellos que
aspiraban a intervenir y desarrollarse en el comercio de mercancías. Al mismo
tiempo, significaba una oportunidad de negocio que no era exclusiva de otras, pero
que permitía la diversificación, teniendo en cuenta también el comercio
interregional o terrestre, la actividad de transporte marítimo "pacífica", así como,
en algunos casos, el Contratos con el Estado. Estos corsarios pudieron obtener,
mediante la fuerza, ingresos inesperados del sombrío comercio "español" con la
península: el de sus competidores que estaban del otro lado, leales al rey ibérico.
Este artículo mostrará el desarrollo de este tipo de negocios relacionados con el
caso chileno y profundizará el análisis de algunos de los casos ocurridos durante
las primeras décadas del siglo XIX. En aquellos años se produjo el apogeo de este
tipo de actividad, junto con la consolidación de la Independencia y la posterior
construcción del Estado republicano.