República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular Para la Salud

Servicio Autónomo Instituto de Altos Estudios
Dr. Arnoldo Gabaldon

Ensayo

Política, Participación Ciudadana y Salud

Autor: Oscar Ochoa

Maracay, Febrero 2019

 INTRODUCCION

El proyecto contenido en la Constitución de la República Bolivariana de

Venezuela (CRBV) año 1999, como el de refundar la República para establecer

una sociedad democrática, participativa y protagónica sólo será posible si ese

proceso se desarrolla , tal como lo demanda el propio enunciado, mediante la

efectiva participación de los ciudadanos y las ciudadanas.

La participación ciudadana en Venezuela, para entenderla es necesario

saber que es un derecho y un deber, es un instrumento donde los ciudadanos

expresan propuestas, opiniones, decisiones para mejorar el buen vivir, con el

objetivo de transformar las políticas, la vida, la salud, las instituciones públicas, el

territorio, la ética, la economía, el modo de producción, la cultura, las

desigualdades sociales que generan crisis civilizatoria que amenazan la vida del

planeta, como dice el profesor Oscar Feo el mundo está enfermo, solo si somos

capaces de comprender las causas y actuar sobre ellas podremos salvarlo.

 DESARROLLO

Sobre el derecho de la participación ciudadana, la Constitución de la

Republica Bolivariana de Venezuela dispone dos formas para su ejercicio:

individual y colectivamente “la participación individual y comunitaria en el orden

social y estatal”, otorgándole el poder a la comunidad para la participación

colectiva en el ámbito de la planificación de las políticas públicas (formación,

ejecución y control de la gestión pública), se le reconoce como la máxima

expresión organizativa para el ejercicio de ese derecho. Es desarrollado en las

Leyes del Poder Popular y se va concretando en la práctica social del país, se

destaca la importancia de la comunidad como el ámbito geográfico básico de la

Nación, la territorialidad es importante conocer porque es el escenario

fundamental donde transcurre la vida. En él se expresa la condición de existencia

material de las sociedades, establecida por los procesos productivos y

reproductivos que se dan en su interior, se resume la diversidad y pluralidad de la

sociedad, al habitar e interactuar en su espacio ciudadanos con diferentes

maneras de pensar, intereses disímiles, distintas ocupaciones y diversas formas

de organización: de trabajadores, consumidores y amas de casa, culturales,

deportivas, ecológicas, juveniles que confluyen en el objetivo colectivo del bien

común.

Desde el pensamiento crítico, en la actualidad Venezolana,

lamentablemente no hay real participación popular, la gente no participa, y cuando

lo hace se trata de manipular y controlar esa participación, viendo los problemas

de la comunidad o de salud, aun desde la perspectiva del pensamiento positivista

en donde lo social y lo biológico están por separado. Pero nuestro sistema de

salud está en una etapa de transición, donde sigue mirando la salud desde la

enfermedad y no desde la influencia social, histórico y cultural que esta tiene.

La participación comunitaria en nuestro centro de salud es escasa, las

comunidades no tienen la suficiente formación para empoderarse como poder

popular que tiene derechos pero también el deber de participar activamente con

ideas propias y no dirigidas por un partido político o por intereses personales.

En nuestras comunidades solamente nos reunimos para hablar de un

beneficio del gobierno, o criticar al mismo, .etc. Entonces la participación

comunitaria se ha vuelto partidista, y realmente no existe una participación libre e

independiente de las corrientes políticas.

Para mejorar la situación de salud de los pueblos, es necesario luchar

contra las desigualdades sociales, mejorar las condiciones de vida, luchar contra

la distribución desigual del poder, el dinero y los recursos, en pocas palabras

pensar en el plano colectivo y dejar a un lado el ego, y lo individual.

Las ciudades latinoamericanas y el territorio urbano se configuraron en

relación a la imposición de territorialidades tanto en el campo, provocando o

intensificando el ritmo de las migraciones hacia las ciudades, respondiendo a

ordenamientos territoriales moderno desarrollistas que traen como consecuencia

desigualdades sociales, problemas de salud en la población y falta de planificación

de vivienda con buenos aseo, alcantarrillado para disponer de las aguas servidas,

en donde predominado la cultura y pensamiento colonial (en el norte viven las

clases más altas y en el sur las clases más desatendidas). El culpable de esta

migración del campo a las ciudades es el extractivismo.

El extractivismo avanza a un ritmo frenético, al auge de las explotaciones

petroleras y mineras, con la expansión de la superficie territorial ocupada por

monocultivos forestales, y del agronegocio en general bienes generados y

localizados en determinados ecosistemas el agua, el suelo, el aire, la energía, la

biodiversidad que son apropiados privadamente y desterritorializados para

abastecer económicas localizadas en otros territorios.

Las huellas que este tipo de economía deja sobre los territorios son

evidentes en las deforestaciones, en las contaminaciones de ríos, lagos y suelos,

en la pérdida de biodiversidad y bases de supervivencia, deja a las poblaciones en

condición de discapacidad, enfermedades y muertes por contaminantes, efecto de

una marca constitutiva del modelo de desarrollo capitalista moderno/colonial: el

sacrificio, que es ilustrativo de la insustentabilidad del modelo que se ha

materializado en este tipo de territorios y han configurado ‘zonas de sacrificio’

ambiental.

Para finalizar el concepto de la OMS sobre salud ellos lo desarrollan como

ausencia de enfermedad o bienestar físico, olvidando por completo que el

concepto de salud es epistemológico, es más amplio, verlo de otra forma en

donde debe englobarse la parte social, económica, territorialidad más allá de la

esencia biológica del ser humano.