La estrategia sanitaria de salud mental ha ido evolucionando a partir del 2001

fortaleciéndose cada vez más creándose la dirección de salud mental así como
también se incluyó en el presupuesto por resultados. En el 2016 se aprueba el
documento técnico “lineamientos para la atención en salud mental”
formulándose un plan nacional.

Mucha gente, cuando escucha el término de salud mental, piensa en enfermedad

mental. Pero la salud mental es mucho más que la ausencia de esta. Tiene
relación con la vida cotidiana de todos nosotros, con el modo con que cada uno
se lleva con su familia, en el colegio, en el trabajo, en el juego, con sus padres,
en su barrio, en la comunidad. La salud mental es algo que todos deseamos para
nosotros mismos, ya sea que lo sepamos por su nombre o no. Cuando hablamos
de la felicidad, de la tranquilidad de espíritu, de la capacidad de goce o
satisfacción, estamos usualmente hablando de la salud mental por ende el plan
de estrategia sanitaria de salud mental tiene como concepción al ser humano
como un ser integral, biopsicosocial, espiritual y comunitario siendo esto positivo
debido a que la salud mental es una dimensión inseparable de la salud integral
manifestándose el bienestar subjetivo de cada persona teniendo como finalidad
contribuir a la mejora de esta y la calidad de vida de la población en particular de
las personas con trastornos mentales y problemas psicosociales así como
también sus familias y comunidades.
Se está dando mayor énfasis al nivel primario, el cual consiste en la promoción
de la salud y prevención de enfermedades aumentando el número de
profesionales como son los psicólogos en los establecimientos de primer nivel
dando atención a todos los grupos etareos, a la familia y comunidad como se
mencionó anteriormente promoviendo estilos de vida saludables, una cultura de
respeto y no discriminación, reduciendo los factores de riesgo de las
enfermedades mentales, previniendo los determinantes sociales en la salud
mental de la población por lo que es importante que la estrategia sanitaria de
salud mental esté en todas las atenciones y en todos los programas de salud.
Debe existir un adecuado financiamiento para que la estrategia se mantenga a
través del tiempo asimismo realizar trabajos de investigaciones continuas y una
articulación intersectorial desde el sector de salud.
La provisión de los servicios de salud mental están de acuerdo a su población y
situación epidemiológica evitando de esta manera que exista un inadecuado uso
de los recursos.
Este plan sanitario de salud mental por el MINSA está bien estructurado porque
articula no solo al individuo sino también a la comunidad, a los distintos sectores,
rigiéndose bajo normas , resoluciones ministeriales para que se maneje de
manera adecuada