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El interés en el desarrollo humano antes del nacimiento es muy amplio debido a la curiosidad
acerca de nuestro comienzo y al deseo de mejorar la calidad de vida. Los complicados procesos
mediante los cuales un niño se desarrolla a partir de una única célula son milagrosos y pocos
fenómenos son más emocionantes que una madre que observa a su feto durante una ecografía.
El desarrollo humano constituye un proceso continuo que comienza cuando un ovocito de una
multicelular. A pesar de que la mayoría de los cambios del desarrollo suceden durante los
El presente informe tiene como fin informar al lector sobre el tema del aborto, considerando
final de el mismo se exponen diagnósticos y cuidados de enfermería en este tema que es muy
importante en la actualidad.
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FACULTAD DE ENFERMERÍA
Dpto. Enfermería de la Mujer y Niño
Elaborado por:
Haro, A. & Herrera, G. 2
Prof. Victoria García Casós
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II. DEFINICIÓN
Aborto es la pérdida del feto antes de las 20 semanas de gestación o con un peso menor
de 500 gramos (Callahan, T. & Caughey, A. 2018 ).
La Organización Mundial de la Salud, con el objetivo de unificar criterios y no
subestimar la muerte del feto, en 1977 definió el aborto como: “La expulsión o
extracción uterina de un embrión o feto de 500 g o menos”. Más tarde, la Sociedad
Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), estableció la edad gestacional de 22
semanas, que coincide aproximadamente con el peso establecido por la OMS y con la
edad vigente en la legislación española para la interrupción voluntaria del embarazo
(IVE). Asimismo, según Cuningham,F (2005) dice que el comienzo del embarazo se
define como el momento de la implantación, la pérdida del embarazo puede tener
lugar en cualquier momento después de la implantación del blastocisto.
Desde el punto de vista médico se considera que la palabra aborto conlleva la
terminación de la gestación después que el blastocisto se ha implantado en el
endometrio pero antes que el feto alcance viabilidad. En la actualidad sobreviven fetos
que pesan 500 g y que corresponden con embarazos de unas 24 semanas. El concepto
de viabilidad se considera de acuerdo con la duración del embarazo, el peso fetal y la
disponibilidad de los recursos tecnológicos en el área neonatal.
Según Moore,K.,Persaud,T & Torchia,M (2016) no hay un límite bien establecido del
desarrollo, la edad o el peso corporal a partir del cual el feto sea automáticamente
viable o por encima del cual esté garantizada su supervivencia; sin embargo se a
demostrado que es poco habitual la supervivencia de los fetos con un peso corporal
inferior a 500 g y de los fetos con una edad desde la fecundación inferior a 22 semanas.
Incluso los fetos presentan dificultades para sobrevivir, principalmente porque sus
sistemas respiratorio y nervioso central no están completamente diferenciados. Esto se
debe a que entre las células epiteliales escamosas hay células epiteliales secretoras
redondeadas dispersas, los neumocitos tipo II, que segregan el surfactante pulmonar,
una mezcla compleja de fosfolípidos y proteínas, los cuales forman una película mono
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molecular que reviste las paredes internas de los sacos alveolares y que contrarrestan
las fuerzas superficiales de tensión existentes en la interfase aire- alvéolos. De esta
forma se facilitara la expansión de los sacos alveolares evitándose la atelectasia(cierre
de los sacos durante la espiración).La maduración de los neumocitos tipo II y la
producción del surfactante muestran grandes variaciones en los fetos de edades
gestacionales diferentes, aumentando durante las fases finales del embarazo. La
producción de surfactante comienza a las 20 a 22 semanas, pero este compuesto sólo
está presente en cantidades pequeñas en los lactantes prematuros; no alcanza niveles
adecuados hasta el período fetal tardío.
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IV. TIPOS :
4.1. Amenaza de aborto: Cualquier hemorragia vaginal antes de las 20 semanas sin
dilatación del cérvix o expulsión de PDC, por ejemplo un embarazo normal con
hemorragia (Callahan, T. & Caughey, A. 2018 ).
Por otro lado, según Botero, J., Jubiz, A. & Henao, G. (1997) se presenta una
hemorragia escasa que se puede prolongar por varios días. El dolor usualmente
se irradia hacia la región lumbosacra. El diagnóstico se hace porque el útero se
encuentra aumentado de tamaño y guarda relación con la amenorrea. El cuello
está cerrado, formado y sin ningún tejido extraño a su alrededor. Se define el
diagnóstico con el estudio del nivel de las subunidades beta de las
gonadotropinas b-HCG y la ecografía se encarga de confirmar o negar el mismo.
4.2. Aborto inevitable: Según Callahan, T. & Caughey, A. en el 2018, dice que no
hay expulsión de productos de la concepción pero la hemorragia vaginal y la
dilatación del cérvix son tales que es improbable un embarazo viable.
Cuando la amenaza de aborto no cede al tratamiento, el cuadro clínico progresa
hasta la fase de inevitable. Las contracciones se incrementan, el dolor es más
intenso y la hemorragia más severa, la actividad uterina está aumentada, el
cuello se dilata más, el dolor se hace insoportable y las membranas casi siempre
se rompen súbitamente. En este momento el aborto es inevitable; término que
para otros se considera inminente. En esta etapa el proceso es irreversible y el
aborto tendrá lugar en corto tiempo (Botero, J., Jubiz, A. & Henao, G., 1997).
4.3. Aborto incompleto: Expulsión parcial de los PDC antes de las 20 semanas de
gestación (Callahan, T. & Caughey, A. 2018).
En 1997, Botero, J., Jubiz, A. & Henao, G. dicen que la paciente consulta la
mayoría de las veces cuando ha expulsado el embrión o feto y la placenta queda
retenida en el útero.
4.4. Aborto completo: Expulsión de todos los PDC antes de las 20 semanas de
gestación (Callahan, T. & Caughey, A., 2018).
Por otro lado, Botero, J., Jubiz, A. & Henao, G. en 1997 se refiere a aborto
completo cuando el útero queda vacío después de la expulsión del feto, la
placenta y sus membranas. Generalmente ocurre cuando la gestación es menor
de 8 semanas y el tejido placentario no tiene una fijación muy compacta a través
de las vellosidades.
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4.5. Aborto fallido: Es la retención del embrión en la cavidad uterina por lo menos
durante cuatro semanas después de su muerte se conoce como aborto frustro.
De acuerdo con la edad gestacional en el momento de ocurrir la muerte del
embrión o feto, la paciente observará primero que los movimientos fetales han
desaparecido, que el crecimiento uterino se detiene y que posteriormente
disminuye, los cambios mamarios propios del embarazo regresan y el sangrado
es escaso, de color café negruzco, el cual persiste por varios días (Botero, J.,
Jubiz, A. & Henao, G., 1997).
4.6. Aborto recurrente: Botero, J., Jubiz, A. & Henao, G. refieren que cuando una
misma paciente tiene historia de 3 o más abortos espontáneos consecutivos, se
considera que es un aborto recurrente. Sin embargo, se inicia el estudio de
infertilidad después del segundo. Se ha calculado que sólo una cuarta parte de
las mujeres con aborto recurrente llevan a feliz término un nuevo embarazo.
4.7. Pérdida gestacional recurrente: Es aquella con tres o más AE consecutivos.
Menos de 1% de la población es objeto del diagnóstico de perdida gestacional
recurrente. El riesgo de AE después de uno es de 20 a 25%; después de dos
consecutivos, de 25 a 30%, y después de tres consecutivos, de 30 a 35%.
Incluyen anomalías cromosómicas, enfermedad sistémica materna, defectos
anatómicos maternos e infección, el 15% los pacientes presentan el síndrome de
anticuerpos antifosfolípidos(SAA).
Se cree que otro grupo de pacientes tiene un defecto de la fase lútea y carece de
una cifra adecuada de progesterona para mantener el embarazo.
V. SIGNOS Y SÍNTOMAS
5.1. En aborto del primer trimestre:
Hemorragia vaginal
Cólicos
Dolor abdominal
Disminución de los síntomas gestacionales
5.2. Amenaza de aborto
Hemorragia ligera
Dolor leve en la parte baja de abdomen
5.3. Aborto inevitable
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para valorar que se expulsaron PDC como para el análisis cromosómico, de ser
aplicable.
Un aborto incompleto puede dejarse concluir por sí mismo si la paciente
prefiere el tratamiento expectante, pero también puede completarse en forma
quirúrgica o médica. El tratamiento quirúrgico de un aborto del primer trimestre
requiere dilatación y legrado en el consultorio o el quirófano. Las paciente
hemodinámicamente inestables, en general, requieren tratamiento quirúrgico
urgente. La terapia médica incluye la administración de prostaglandinas
(misoprostol), con o sin mifepristona para inducir la dilatación del cérvix, las
contracciones uterinas y la expulsión del embarazo. Los abortos inevitables y
los diferidos se tratan de manera similar.
Una paciente con amenaza de aborto debe ser vigilada en cuanto la hemorragia
continúa y ponerse en reposo pélvico, sin ninguna maniobra vaginal (Callahan,
T. & Caughey, A. 2018 ).
6.2. En abortos del segundo trimestre
Los abortos incompletos y diferidos se pueden dejar de concluir
espontáneamente, pero a menudo se concluyen por D y E (dilatación y
evacuación).
La diferencia entre D y L y D y E depende de la edad de gestación en el
momento del procedimiento( p, ej.,primero o segundo trimestre). el feto es más
grande en el segundo trimestre, lo que dificulta el procedimiento.
Entre las 16 y 24 semanas se puede hacer un D y E o inducir el trabajo de parto
con dosis elevadas de oxitocina o prostaglandinas.La ventaja de un D y E es que
el procedimiento es autolimitado y se realiza más rápido que una inducción del
trabajo de parto. Sin embargo , se requiere dilatación amplia del cuello uterino
antes del procedimiento, con tallos de laminaria(pequeños cilindros de algas
marinas que se colocan en el cérvix durante 1 a 2 días antes del procedimiento,
adminículos que se expanden entonces conforme absorben agua y, de esta forma
dilatan el cérvix), y conlleva un pequeño riesgo de perforación uterina y
laceraciones cervicales. Una inducción del trabajo de parto puede requerir más
tiempo, pero permite concluir el aborto sin riesgos inherentes a la
instrumentación (Callahan, T. & Caughey, A. 2018 )
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En el primer trimestre
Legrado por aspiración(D y L)
Aspiración manual por aplicación de vacío
Aborto médico, no quirúrgico
Misoprostol
Mifepristona más misoprostol
Metotrexato más misoprostol
En el segundo trimestre
Evacuación quirúrgica del útero (D y E)
Inducción médica del trabajo de aborto
Mifepristona seguida por misoprostol
Misoprostol
Oxitocina
*Uso hasta los 70 días a partir del inicio del último periodo menstrual.
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En todo aborto, la mujer debe pasar por un trabajo de parto (aunque en menor medida)
en el cual el sangrado y el dolor físico serán protagonistas con todo lo que ello implica
a nivel corporal y emocional. “El aborto es un evento devastador” (Swanson, Connor
& Jolley, 2007) “ya que la madre debe parir un hijo no desarrollado desde lo biológico
y muerto desde lo simbólico lo cual es un hecho extremadamente doloroso tanto física
como afectivamente” (Mariutti, Almeida & Panobianco, 2007).
Según Swanson, Connor y Jolley (2007), luego de la experiencia del AE se pueden
apreciar en la mujer estados de culpa, desconcierto y miedo con respecto a una futura
gestación, creencias de que ésta tampoco llegará a término, sensación de vacío,
incapacidad para darle significado a la pérdida del hijo y necesidad de ser escuchada y
apoyada por su entorno médico y familiar. Asimismo, existe una necesidad urgente de
darle sentido a lo sucedido, de conocer cuáles fueron las causas (físicas o psicológicas)
que desencadenaron la pérdida del hijo. White y Bouvier (2005) comenta: “La paciente,
y su pareja pueden sentirse culpables pensando erróneamente que de alguna manera
ellos provocaron la pérdida”. Esto se debe al advenimiento de un acontecimiento tan
estresante que además genera un profundo sentimiento de pérdida, mucha tristeza,
abatimiento, irritabilidad y en ocasiones falta de ilusión e interés por cosas que antes
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La meditación es
-Ofrecer grupos de un entrenamiento
apoyo y medidas de para la mente y el
autoayuda: meditación corazón que lleva
una mayor libertad
mental ante
sentimientos de
tristeza y dolor
ayudando a que
estos disminuyan.
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ANEXOS
ANEXO 1:
ANEXO 2:
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