1.

- Exponga brevemente cuales son los principales rasgos económicos, políticos e ideológicos que define a la bipolaridad o guerra fría.

Después que Hitler violara el acuerdo de no agresión entre Alemania y la URSS, desde el corazón de la capital, Rusia, se generó una contraofensiva del Ejército
Rojo que hizo retroceder a las fuerzas Nazis; fue tal el empuje del ejército Soviético, que por país que pasaba lo liberaba y tomaba el poder el partido
comunista de la resistencia al Fascismo dominante, hasta la llegada a Berlín, capital de Alemania, donde los demás países aliados , hicieron valer ”ciertos
derechos” obligándose a llegar a ciertos acuerdos, generándose ,prácticamente una repartición de Europa entre las fuerza aliadas adscritas al capitalismo y su
democracia occidental y los países que pasaban a la órbita comunista, tal vez como recompensa al éxito militar del ejército soviético. De allí también surgen
dos Alemanias, una la Federal, capitalista y otra, la Democrática, comunista, quienes al poco tiempo, igual que el resto del mundo, van a conocer el Muro de
Berlín, la odiosa frontera que dividió a un país y al mundo hasta 1988.
Una vez finalizada la II Guerra Mundial las Naciones vencedoras crean la ONU en 1945 y se inicia, también, La Guerra Fría, que no es más que la rivalidad que
surge entre dos potencias: USA y la URSS y los aliados de ambos, quienes se nuclean en dos bloques antagónicos: Capitalista y Comunista respectivamente que
desarrollan una desenfrenada carrera de armamento nuclear.
La Guerra Fría evitó un enfrentamiento bélico directo, pero produjo un enfrentamiento ideológico y cultural, así como un mundo dividido y la intervención en
todos los campos de los países aliados por parte de las potencias.

2.- ¿Qué principales rasgos se tienen para hablar del fin de la guerra fría y que inferencias tiene dicho proceso en el contexto
internacional?

Estados unidos y la Unión Soviética en la búsqueda de tener la hegemonía, en su rivalidad, que no respetó escenario alguno, y los severos miedos
anticomunistas de uno y el odio anticapitalista del otro, los conllevaron a cometer y justificar todo tipo de excesos.
El mundo entero estaba involucrado en un conflicto que inicialmente sólo era de las superpotencias en su afán de dominar política e ideológicamente al resto
de los países, sin respetar ni soberanía, ni autodeterminación alguna de ninguno de estos. Eso sí, entre ellos, las potencias, no se atacaban, ni agredían
directamente, sino más bien tenían sus propios códigos diplomáticos definidos a los que denominaron “coexistencia pacífica”.
Hubo un proceso silente, continuo producto de la propia dinámica del desarrollo de las fuerzas productivas, de la tecnología, de las comunicaciones, el
desarrollo de las empresas y corporaciones trasnacionales, el surgimiento de economías emergentes y nuevos países industrializados; la dependencia petrolera
de los países desarrollados, el uso del petróleo como arma política y la creación de la OPEP; el surgimiento de los países “no alineados”, el creciente valor
mundial de los derechos humanos, la interdependencia entre países entre otros, fueron elementos que fueron erosionando la guerra fría, que tuvo su clímax
con la desintegración de la URSS, la caída del muro de Berlín y vuelta a la democracia de muchas naciones sumidas en el oscurantismo comunista, como claras
expresiones del fracaso de ese sistema que atentó( y atenta) contra las libertades individuales, la libertad de pensamiento y el derecho a la propiedad privada
y al libre tránsito.

El concierto de naciones, una vez concluido formalmente los bloques de países y el fin de la Guerra Fría, inician ciertos procesos de verificación, rectificación,
reorientación de sus propios procesos políticos, económicos, ideológicos, con un marcado acento de interdependencia económica que le concede cierto aire
multipolar y el avance y consolidación de la democracia como sistema político que le confiere cierto aroma de unipolaridad.

Para finalizar, se presenta el siguiente gráfico que resume lo estudiado en este tema.