Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Introducción
Con frecuencia, el ingeniero debe dar soluciones factibles, en base a ciertos requerimientos, a
problemas ingenieriles. Debe decidir a priori el enfoque, técnicas o métodos más convenientes
para cada caso en particular. Algunas veces, estas soluciones pueden ser sencillas, debido a que
están bien definidas tanto la parte técnica como la parte económica, por lo que sólo basta
aplicarlas. En otros casos, los problemas son complejos o desconocidos como es el de conocer
el comportamiento hidráulico del flujo de agua al pasar por una presa derivadora y al ser captada
por una toma. En estos casos, se evaluará que tipo de investigación se va a adoptar. Dicha
investigación se iniciará conceptualizando y esquematizando el problema, después se
seleccionará la técnica física o matemática para estudiar el problema. A este proceso de
abstracción se le conoce como modelación. En definitiva, la modelación implica simular un
fenómeno real, conceptualizándolo y simplificándolo en mayor o menor medida, para luego, por
último describirlo y cuantificarlo.
b) Cavitación:
c) Erosión / Sedimentación
Como un antecedente inicial tenemos que el desarrollo de modelos físicos data de hace
150 años aproximadamente, mientras que el desarrollo matemático dio un salto
importante gracias al desarrollo computacional 30 años antes.
4.1. Modelación física
Un modelo físico es en la práctica, una representación del proyecto real, a una escala
adecuada para ser factible, tanto en su construcción como en su estudio, el cual se lo
puede explicar y predecir a través de la teoría. Estas construcciones en escala reducida
buscan reproducir el comportamiento real de las obras de ingeniería para comprender
y estudiar su comportamiento permitiendo perfeccionar modelos reducidos de esclusas,
puertos, represas, puentes, aeronaves, etc.
Para las estructuras hidráulicas esta es una disciplina altamente aplicada, pues es de las
más confiables y complementa de manera bastante acertada el modelo numérico. Ya
para casos prácticos, se debe plantear que el ingeniero busque una representación más
sencilla, en términos de escalas, que sea geométricamente similar al fenómeno real del
agua dentro del proyecto de estudio.
Ambos tipos de modelos pueden definir el problema, identificar las fuerzas actuantes y
definir objetivos del tratamiento experimental. Sin embargo, el modelo físico permite
definir similitudes de los criterios de dinámica total y restringida, permiten la
construcción del modelo, medir magnitudes reales a escalas propuestas y plantear
soluciones, que a su vez pueden ser reproducidas y comprobadas en el mismo modelo
con las variables constructivas del modelo.
Las principales restricciones que presenta este tipo de modelos son:
1. El tamaño del modelo, que será definido por el tamaño del laboratorio.
2. El caudal, función de la estación de bombeo
3. La línea de energía, variante con los niveles de los tanques elevados
4. Leyes de similitud dinámica
Principios de similitud
Para obtener resultados óptimos el modelo físico que se vaya a representar deberá
tener relaciones geométricas, cinemática y dinámica, del modelo a representar.
Similitud geométrica
Similitud Cinemática
Se relaciona en parte con la similitud geométrica, ya que para lograr una similitud en
el movimiento se debe tener similitud de longitud y tiempo.
Similitud Dinámica
Similitud Sedimentológica
El material del lecho móvil deberá seleccionarse cumpliendo, por lo menos, con la
identidad del número de Froude, relacionado al grano (Fr*), en modelo y prototipo.
Calibración
Para que nuestro modelo tenga éxito, es necesario verificar si en realidad puede
reproducir el comportamiento de nuestro proyecto a diseñar, para esto la calibración
de nuestro modelo es muy importante la calibración consiste en adecuar las condiciones
y características físicas e hidráulicas como por ejemplo rugosidad del lecho, descarga,
niveles de agua, esto consiste en un proceso iterativo
Existe muchas formas de clasificar los modelos numéricos. Por lo que se presenta la
siguiente:
4.2.1. Dimensionalidad
En los modelos unidimensionales (1D) se asume que una de las dimensiones prevalece
sobre las otras dos. Esta longitud es la longitudinal a lo largo del eje del río o canal. La
información topográfica e hídrica se introduce mediante secciones transversales.
Se asume que el flujo es perpendicular a la sección transversal, lo cual es una de sus
limitaciones, este tip de modelos son aplicables en tramos de ríos y canales muy largos,
generalmente mayores a 20 veces el ancho.
Los modelos bidimensionales (2D) consideran las variaciones en las dos dimensiones del
plano horizontal. Las variaciones de la velocidad u otra magnitud de interés en la
columna vertical del agua se promedian y se asumen como un único valor. Este tipo de
análisis es muy utilizado en flujos muy extendidos (como estuarios, lagos, etc) donde la
variación vertical de velocidad es pequeña, de aquí viene el nombre de modelo de aguas
someras o poco profundas.
No es aplicable en casos que la variación vertical de velocidad es apreciable, como por
ejemplo el flujo sobre un vertedero o a través de un orificio sumergido.
Lo modelos tridimensionales (3D) representan el estado más avanzado de la
modelación. Estos modelos son capaces de calcular las tres componentes espaciales de
la velocidad, y por tanto aplicables a cualquier caso práctico
Estos métodos resuelven las ecuaciones que tienen dominio continuo mediante la
solución en un número finitos de puntos discretos en dicho dominio. Cuando los valores
buscados (tirante, velocidad, etc.) en dichos puntos discretos son encontrados, la
solución en cualquier otro punto puede ser aproximada mediante métodos de
interpolación
En el flujo permanente se asume que las todas las magnitudes hidráulicas son
constantes en el tiempo, y es el tipo de flujo que los programas asumen para su cálculo
mientras que en el flujo transitorio las magnitudes como tirantes o velocidades pueden
cambiar con el tiempo.
4.2.5. Contorno del cauce
Las expresiones clásicas de la hidráulica consideran los contornos o fronteras del canal
como lecho rígido indeformable, lo cual es cierto para muchas estructuras artificiales;
pero no para cauces aluviales, en los cuales se presenta lecho móvil. La modelación de
ríos aluviales, especialmente los de lecho fino, requieren casi siempre capacidades de
modelación en lecho móvil y flujo impermanente para lograr reproducir los cambios
reales del fondo.