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(I ESCENA)
NARRADOR: Entró Jesús a Jerusalén montado en un pollino, a su paso las personas tendían sus
mantas por el camino cuando llegaban ya cerca de la bajada del monte de los olivos toda la
multitud comenzaron a alabar a Dios (CANTAN VAMOS A ALABAR AL SEÑOR) BENDITO EL REY QUE
VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR, PAZ EN EL CIELO Y GLORIA EN LAS ALTURAS. Entonces algunos
fariseos de entre la multitud le dijeron: Maestro reprende a tus discípulos. El responde
LA ÚLTIMA CENA
(II ESCENA)
NARRADOR: Jesús se sentó a la mesa con sus doce apóstoles, y mientras comían dijo:
JESÚS: De cierto os dijo que uno de vosotros me va a entregar. (entristecidos le preguntaba cada
uno)
JESÚS. - El que mete la mano conmigo en el plato, ese me va a entregar. (Judas metió la mano en el
plato junto con Jesús).
JESÚS. - Tomad y bebed todos de él porque esto es mi sangre, sangre de la Alianza que será
derramada por vosotros por el perdón de los pecados.
(III ESCENA)
JESÚS. - ¡Padre! Si hubiera llegado mi hora dame fuerzas. Dame valor para no responder con
violencia a la violencia de ellos. Si me llevan a juicio, que tenga palabras para denunciarlos en el
tribunal, si me torturan que sepa callar para no delatar a mis compañeros. Ellos quieren matarme,
Padre …pero yo no quiero morir. ¡Todavía no! ¡Todavía no! (Jesús se dobló y pegó la cara contra la
tierra y arañó las piedras con las manos, con las uñas desesperadamente).
(Los discípulos dormían, solo Jesús se mantenía despierto y oraba) Padre si es posible pasa de mí
esta copa, pero que no se haga mi voluntad sino la tuya. (se acerca a sus discípulos) ¿Por qué
dormís? Levantaos y orad para que no caigáis en tentación.
JESÚS. - Con un beso entregas al hijo del hombre. (los soldados se acercan a Jesús y le amarran las
manos)
PEDRO. - (Apretó la espada, apretó los dientes y se lanzó como una flecha contra los soldados y le
cortó la oreja a uno de ellos)
JESÚS. - Si vienen por mí dejen libre a todos estos, PEDRO, SANTIAGO, JUAN…. váyanse de aquí,
avísenle a mi madre y a las mujeres. (LE AMARRARON LAS MANOS A LA ESPALDA Y CON OTRA
CUERDA ATADA A LA CINTURA TIRARON DE EL.)
ANDRÉS.- ¡MARÍA!¡MARÍA!
MARÍA.-¿A quién?
MARÍA.- ¡Ay ,no,ay,mi hijo! ¡no puede ser! ¡ay no! VAMOS, PRONTO A VERLO.
(IV ESCENA)
ESCRIBA. - Ilustre tribunal, excelencias, nos hemos reunido para enjuiciar la doctrina y la actividad
de un israelita de nombre Jesús, hijo de un tal José y de una tal María. La gravedad de las
acusaciones que pesan sobre el detenido nos obligan a reunirnos en sesión extraordinaria a
petición de nuestro sumo sacerdote JOSÉ CAIFÁS. ¡QUE PASE EL ACUSADO! (dos guardias lo
hicieron entrar, con las manos atadas a la espalda y todo el pelo revuelto, Jesús avanzó hasta el
centro de la sala. Tenía la cara hinchada por los golpes recibidos).
SACERDOTE: Este embaucador se dejó llamar Mesías por el populacho, óiganlo bien: MESÍAS DE
ISRAEL Y también HIJO DE DAVID.
CAIFÁS.- (Se levantó bruscamente. Después alzó las manos pidiendo silencio, clavó sus ojos de
lechuza sobre Jesús) TÚ el nazareno ¿Te consideras el mesías, el libertador de nuestro pueblo?
CAIFÁS.-¡Te estoy hablando yo, el sumo sacerdote de Israel, la voz de Dios en la tierra! ¡Responde!
¿Quién te crees que eres? ¿El mesías?
JESÚS.-(Alzó lentamente la cabeza,sonrió irónicamente) ¿Para qué lo preguntas? Si te digo que si,
no me vas a creer. Y SI TE DIGO QUE NO NO ME VAS A SOLTAR ¿entonces?
CAIFÁS.-( Visiblemente enfadado) Pongo a YAVÉ por testigo, yo te conjuro por el nombre del
bendito a que declares si eres el Mesías, hijo de David, hijo de Dios.
JESÚS.- Tú lo has dicho, lo soy y también pongo a YAVÉ por testigo, Él sabe que no miento.
CAIFÁS.-( Se llevó las manos a cuello, rojo de irá como si le faltara la respireción.)BLASFEMIA
ANÁS.-Colegas, por favor, no perdamos la calma,que es la primera virtud de un buen juez,¿no sería
más prudente entregar el caso al gobernador Pilatos y que Roma lo juzgue?
(V ESCENA)
SOLDADO.- Pase usted y todos los magistrados, pero esta chusma no, FUERA.
CAIFÁS.- No podemos entrar porque es víspera del gran sábado de la pascua, nuestra ley lo
prohíbe, ve y dile al gobernador que se digne salir un momento.
PILATO.- ¿Qué demonios ocurre? ¿No acaba de salir el sol y ya están alborotando?
CAIFÁS.- Ilustre gobernador disculpe que lo hayamos molestado tan temprano, pero créanos, es un
asunto urgente.
CAIFÁS.-De este hombre (los soldados empujan a JESÚS para que Pilato lo vea)
CAIFÁS.- Te lo hemos traído porque es un asunto político, se ha rebelado contra Roma y es Roma a
quien le corresponde juzgarlo. Nosotros no podemos firmar la pena de muerte que es la que se
merece.
PILATO.-No pueden firmarla, pero por lo que veo casi lo ejecutan, .Ese hombre está muy golpeado,
¿Con qué autorización han maltratado a un prisionero político que me pertenece a mí?
CAIFÁS.- Mil perdones gobernador, el acusado opuso resistencia, además tenía muchas armas.
PILATO.- Nombre, familia y lugar de origen, no has oído, te he dicho, ¿cómo te llamas y de dónde
eres?¿qué te pasa?¿tanto miedo tienes que se te traba la lengua? Vamos responde ¿qué has
hecho?
PILATO.-Te lo pregunto a ti , no sabes que tengo autoridad para condenarte o dejarte libre.
PILATO.-¿ANJÁ? ¿Con que tienes agallas? ¿no sabes que ahora mismo puedo dictar sentencia de
muerte contra tí?
PILATO.- (Dirigiéndose a Caifás y a los sumos sacerdotes). No encuentro culpa alguna en este
hombre. Llévenlo a Herodes su rey.
EL PALACIO DE HERODES
(VI ESCENA)
( En el palacio de Herodes se lleva a cabo una fiesta, Herodes echado en un sofá cama comía un
lechón mientras mira libidinosamente a SALOMÉ su hijastra que baila con otras bailarinas para él.
Una mujer le echa aire con una palmera y otra le ofrece fruta, comida y bebida.)
HERODES.- ¡Muy bien, Salomé, muchacha¡¡qué bien meneas las caderas, pollita!
HERODES.-¡Por fin te veo las barbas, Jesús de Nazaret! Hemos sido vecinos y aún no nos
conocíamos.
HERODÍAS.- ( Sentada junto a Herodes) y tú profeta ¿no tenías curiosidad por conocer la cara de tu
rey?
JESÚS.- (Con las manos atadas a la espalda sostiene la mirada asustadiza de Herodes)
HERODES.- Ya veo que te han dado una buena tanda en la casa de Caifás, ¿o fue Pilato? Pero tú
eres fuerte y aguantarás eso y mucho más ¿no es verdad? ( mirando a su mujer) ¿Qué te parece a
ti Herodías?
HERODÍAS.- Claro que sí mi rey. Estos campesinos son bueyes, fuertes, brutos y castrados….
HERODES.-(Acercándose más a JESÚS) Dicen que haces milagros (tirándole una manzana) si
desapareces esta manzana sin que me de cuenta, te daré un premio.
JESÚS.- (Seguía inmóvil como una estatua, actitud que ponía muy nervioso a HERODES)
HERODES.-Y Tú, ¿por qué me miras así? ¿quieres hacerme creer que no tienes miedo?
¡pues te equivocas, yo no soy como esa chusma que te aclama! ¡embaucador, charlatan!
HERODÍAS.-Espérate Herodes, no dicen que es el mesías rey, pues que se le note .Ustedes pónganle
este trapo encima.
( VI ESCENA)
PILATO.- Ah, si se me estaba olvidando el nazareno.Hazlo hablar quiero más datos sobre ese grupo
con el que trabaja.
CENTURIÓN.-¿azotes?
CENTURIÓ- Vas a hablar ¿si o no? Quiero los nombres de los que conspiran contigo
CENTURIÓN.-¡habla! ¿dónde están esos que vinieron de Galilea para agitar durante la fiesta?
¿quiénes te apoyan aquí en la capital? ¡habla desgraciado! GOLPEALO.
CENTURIÓN.- ¿Ya te acuerdas cómo se llaman? Vamos habla ¿para quién trabajas?
PILATO.-Ciudadanos estamos en fiesta, y por ello doy amnistía para un preso al que ustedes elijan.
CAMINO AL GOLGOTA
(VII ESCENA)
Los soldados rodeaban a Jesús para impedir que la avalancha rompiera el cerco
Entre la nuca y los brazos les amarraron los palos a los tres condenados a muerte.
El cortejo avanzaba Jesús apenas si podía tenerse de pie,de pronto cayó al suelo
Jesús se levantó y siguió caminando pero estaba tan débil que volvió a caer
CIRENEO.- Simón
(VIII ESCENA)
CENTURIÓN.- Todos fuera, que nadie se acerque, solo los condenados a muerte.
Crucificaron a los tres, a los ladrones los amarraron a las cruces, pero a JESÚS LOCLAVARON.
5.-Tengo sed.
6.-Todo se ha cumplido
MARÍA.-Pareces otro Jesús, como te han puesto mi hijo,ya vez yo tenía miedo.Cuando te fuiste a
Cafarnaún, te lo dije: No te metas en lios hijo,no me hiciste caso, me decías MAMÁ tu siempre
fuiste luchadora y valiente, no hijo que va, tú si que fuiste valiente hasta el final.
‘