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El objeto de los contratos informáticos debe recaer, siempre sobre bienes y/o servicios
informáticos.
Los contratos informáticos son aquellos que transmiten derechos de propiedad o de uso
sobre bienes que realizan funciones de tratamiento automático de la información como el
equipo (hardware) o los programas (software); o bien acuerdan la prestación de diversos
servicios sobre dichos bienes de tipo informático.
Ejemplo:
En el sentido anteriormente citado, los bienes informáticos son de dos tipos: equipos físicos
o hardware y programas informáticos o software.
Es común entre la doctrina que la contratación informática, en cuanto recae sobre bienes
informáticos o electrónicos puede recaer sobre cualquier bien del tráfico, civil o mercantil,
siendo así que la intervención informática tiene un papel de mero instrumento al servicio de
las partes en relación.
Algunos contratos informáticos, pueden ser los que tienen su finalidad en el hardware y otros
en el desarrollo de software.
Estos programas se conocen como programas fuentes y pueden ser fácilmente interpretados
y conocidos sus algoritmos, descripción del cómputo y asociación con datos para gobernar
el funcionamiento del ordenador y obtener unos determinados resultados por cualquier
persona medianamente conocedora de las técnicas de programación.
Con carácter general, no suele realizarse contrato escrito, aunque también con carácter
general del contratante, en muchos casos, online, se tiene que adherir a las condiciones
generales que figuran en la propia Web de alojamiento.
Los programas constituyen la parte blanda (software) o lógica del sistema, y comprende los
procedimientos, reglas y cualquier documentación asociada a la operación de un sistema de
proceso de datos.
Licencias de programas estándar. Los programas estándar son aquellos que se elaboran
previamente para su posterior comercialización en masa.
De ahí que el empresario ha de contar con un servicio que prevenga este evento o lo corrija
en caso que se produzca.
Lo que se pacta es asegurar la perfecta utilización del bien adquirido, realizar las
adaptaciones que sean precisas según las circunstancias e introducir cuantas mejores se
estimen por oportunas.
f) Contrato de escrow
Surge como respuesta a los posibles conflictos que pudieran surgir entre el usuario de un
programa y sus creadores o empresas de software, en relación con la posesión del código
fuente (código fuente es el núcleo formal del programa y constituye la primera expresión
independiente del proceso de creación que alcanza una protección directa del derecho de
autor).
La importancia de este concepto es enorme, de tal manera que quien posea el denominado
código fuente, tiene la posibilidad de alterar de cualquier modo, interconectar y multiplicar
el programa. Ésta es la razón por la que las empresas de software siempre han sido reticentes
a la entrega del código fuente al licenciatario de un programa de ordenador.
Podemos considerar a este contrato como complejo en cuanto a su naturaleza puesto que
participa en cierto modo de la naturaleza jurídica del depósito y de la del de mantenimiento,
con una intención de garantía de protección y aseguramiento de derechos previamente
adquiridos.
Este contrato de escrow se celebra entre la empresa de software, titular de los derechos de
propiedad intelectual sobre el programa, y el usuario del mismo, pero a su vez se exige la
presencia, por la propia esencia del contrato, de un tercero depositario por lo que este
tercero, o bien interviene en el propio contrato o bien se vincula a él a través de un contrato
conexo.
Tratándose de servicios, éstos pueden prestarse por el obligado tanto virtualmente como en
la vida real.
Por ejemplo, un Bufete Jurídico puede resolver una consulta haciendo recomendaciones al
usuario sobre una actuación adecuada a su interés; la consulta podrá reflejarse en un
documento electrónico y transmitirse electrónicamente al usuario (en cuyo caso estaríamos
de nuevo ante comercio electrónico directo), o bien puede también imprimirse en papel y
enviarse por correo o telefax (estando, entonces, dentro del ámbito del comercio electrónico
indirecto).