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POEMARIO N2

Entre las cenizas


nació una flor.
Resistiendo estoicamente
decidió seguir.

Gotas de rocío
la cubren
para que su frescura
no se permita morir.

Una simple flor,


que aroma el tiempo...
regala su ser,
perfuma recuerdos.

Delicada corola
conforman sus pétalos.
Algunas espinas
defienden sus miedos.

Abejas la aman,
el sol le da vida,
la flor sigue firme
sola y erguida.

Sonrie la dichosa morena


sobre la arena de su existencia
donde nace la madrugada
que vela junto a los arcángeles protectores
los arroyuelos en sus mejillas,
sus sublimes ojos pardos
son encantos que deslumbran
pues exhalan sus aromas mas puros
de inspiración que endulza
la bonanza de mi destino.

Rie la dichosa morena


en sus noches de añoranzas
donde los arpegios conjugan
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POEMARIO N2

con su suave faz inocente


a la espera de su luz al alba,
aflorada estrella de naturaleza femenina
en brillo que anega el firmamento azul
al cantar en aquel cosmo que renace
cada vez que crece
su temprana edad de eterno vergel.

Sonrie la dichosa morena,


de encantado edén.

En el bus hay un atasco.


De pronto pienso en ti,
y volando se han posado
cien flores en un árbol.

Refunfuña alguna injuria


la señora que va a mi lado.
Se enciende el firmamento
recordándome tus abrazos.

Te imagino entre rosas


saboreando que te beso.
Sonríe un poco la señora,
parece que se ha calmado.

Pensando en ti escribo versos


el autobús parece el cielo
que pensar en ti me ha regalado.

Quiero tu dulce poema,


donde se guarda tu luz,
dame todo lo invisible,
tu materia no es virtud.
Dame tus alas abiertas,
quiero verlas desplegar,
al origen de tu esencia,
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POEMARIO N2

enfrascada en tu moral,
encarcelada en un cuerpo
que en otra cárcel está...
Vuelve ahora, vuela adentro,
¡Sólo pretendo tu luz!
Lo demás sólo es relleno
para un absurdo ataúd,
lo demás es pasajero
porque lo eterno eres tú

¡Oh, rosa del viento!


Flor de la herida misma de la vida.
Amor en la corona de espinas abierta de la molinera.
¡Que nunca se cierre
con los clavos moliendo nuestras esferas… !
La fragancia y su aliento
impulsándolas
trascendiéndolas en la primavera.

A primera vista resplandecías como el sol,


las luces se apagan y eres un circo fuera de control.
Nadé contra corriente para llegar hasta a ti,
antes de que la cuerda floja se rompiera en mil.

Demasiado tarde tú luz se había descuidado,


y tus pétalos se habían marchitado.
Hasta que el dolor no lo puedas soportar,
no te conviertas en alguien quien pueda extrañar.

Cuando el otoño se llevó tu esplendor dorado,


largo invierno y extraño tu presencia a mi lado.
Solo esperaba que la flor floreciera de nuevo en primavera,
pero el viento se llevó su último aliento antes de la primavera.
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POEMARIO N2

La primavera de papel viene con viejas dobleces


dejé los miembros aterrados
ensuciando el espejo natural
del amor

y así rescatarte los nenúfares


que extrañabas desde que decidiste
echar la llave de aquel hotel atemporal
compartido puntualmente con meridiana fiereza

los hijos que pudieron ser


ya no quieren vencernos
y una eternidad se cierne ante ellos
pájaros que balancean el alba
enturbiando de sábanas nuestras espaldas

se abre la veda del sol


en las habitaciones asoladas
por bigotes félidos.

Mujer dadora de vida, que vienes y vas como el sol.


Brisa perfumada que deja plumas rosas tras su andar,
Silueta perfecta en todas sus formas que ilumina la existencia.
No detengas la orquesta de la música que te persigue,
Que te canta los prodigios de tu sexo y la magia de tu estirpe.
Sonrisa que pinta los senderos de los hombres y navega el mar infinito de
los deseos masculinos.
Piel que no se mancha con lo terrenal, siempre significando maternal.
Llevas en ti el florecimiento del futuro, bordeando tus facciones,
Imprimiéndolas en los rostros de nuestros amores entregados,
En las caricias que tomaste y transformaste en un lazo trascendental.
Porque todo lo conviertes en excepcional.
Ya deja de reírte de tu incapacidad,
Estoy casi seguro que lo único que no puedes es volar.
Pero ni siquiera eso puedo afirmar,
Tan sólo mirarte me hace creer que es verdad
Que los ángeles lloraron cuando comenzaste a caminar.
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POEMARIO N2

Mujer dadora de vida, que vienes y vas como el sol.


Brisa perfumada que deja plumas rosas tras su andar,
Silueta perfecta en todas sus formas que ilumina la existencia.
No detengas la orquesta de la música que te persigue,
Que te canta los prodigios de tu sexo y la magia de tu estirpe.
Sonrisa que pinta los senderos de los hombres y navega el mar infinito de
los deseos masculinos.
Piel que no se mancha con lo terrenal, siempre significando maternal.
Llevas en ti el florecimiento del futuro, bordeando tus facciones,
Imprimiéndolas en los rostros de nuestros amores entregados,
En las caricias que tomaste y transformaste en un lazo trascendental.
Porque todo lo conviertes en excepcional.
Ya deja de reírte de tu incapacidad,
Estoy casi seguro que lo único que no puedes es volar.
Pero ni siquiera eso puedo afirmar,
Tan sólo mirarte me hace creer que es verdad
Que los ángeles lloraron cuando comenzaste a caminar.

La ruleta de la vida
se para donde no lo esperas,
te va ofreciendo salidas
o sentenciando a condenas.

Te hace ver la luz al fondo


para indicarte con tino,
o te hace caer al pozo
que te llevó tu enemigo.

La dicha de estar presente


a la hora en el lugar,
para llenarte de suerte
o para hacerte matar.

Sendero llano o agreste.


Blanco o Negro, Ying o Yang.
Norte o Sur, Este u Oeste.
Sol o Luna, Cielo o Mar.

Te busca por los caminos


emprendas o no la huida,
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POEMARIO N2

y escribirá tu destino
la ruleta de la vida.

Tu sonrisa en el espejo fue mi fiel inspiración,


Lo que parecía tan lejos se acerco a mi corazón...

Y soñé con el sueño tan simple y sencillo,


Derramando mañanas sobre el balcón y sobre todas las cosas,
Iluminando cada rastro de amor, abriendo un poco los ojos,
Para saber que todo cambio es mejor,
Ahora lo se...

La mirada que tenias esa tarde que te vi,


Parecía un desafió tan difícil para mi,
Apostaste pensando que yo perdería,
Derramando mañanas,
sobre el balcón donde siempre te asomabas
Iluminando nuestro rastro de amor,
Abriendo un par de ventanas, para saber que casi todo cambio...

Y regalar tu mirada y tu sonrisa en el espejo de hoy.

Le voy a escribir
a la vida,
le voy a escribir al amor
le voy a escribir,
a la amiga,
le voy a escribir,
a la flor.

Le voy a escribir
al anciano,
le voy a escribir
al señor,
le voy a escribir
a mi hermano,
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POEMARIO N2

le voy a escribir
al dolor.

Le voy a escribir
a la hoja,
le voy a escribir
al Rencor,
le voy a escribir
a la caricia,
le voy a escribir
a la ilusión.

Le voy a escribir
al poeta,
le voy a escribir
a un verso,
le voy a escribir
a mi madre,
le voy a escribir
al silencio.

escribiré una sonrisa


para que sientas el frescor,
mi corazón es la briza
de la que habla mi amor.

A cada flor solitaria del jardín

El Sol obsequia sus cálidos rayos de luz

Para que luzcan sin piedad y con lujuria

Sus colores como lo haces lucir tú:

El brillante castaño en tu interminable cabello,

El rojo sangre en tus labios luego de mis besos,

El terso blanco en tu piel desnuda aún sin dueño,


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POEMARIO N2

El húmedo rosa en tus lugares más profundos y secretos.

Y a mí, al fondo de este pozo al que me condenas,

donde no me alcanza ya más tu luz,

me tocan solo negras y sombrías penas,

el triste gris de tu ausencia en mis ojos y a ciegas,

un frió azul en los recodos de mi alma ajena,

y el consuelo de contemplarte solo en sueños.

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