PROGRAMA DE GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS SÓLIDOS

¿DESOLACIÓN O ESPERANZA?

Un planeta devastado con clima inestable y tóxico, un mundo desordenado sumido

en la pobreza y oscuridad. Solo quedan los vestigios de algo que en su tiempo
llamaron medio ambiente, quizá porque ya se había destruido la otra mitad. A pesar
de varios intentos por recuperar la estabilidad, el fracaso fue inminente. Ahora no
queda nada, la fauna fue reducida a viejos escritos y no son más que historias
fantásticas. La naturaleza reveló su lado más hostil. El equilibrio fue alterado y con
ello la raza humana se sentenció a muerte llevando consigo cualquier esperanza de
vida sobre la faz de la Tierra en su camino.

Los últimos sobrevivientes se dejan llevar por la desesperación. Identificando el

problema y culpando a otros; al gobierno y a sus líderes, pero… ¿ellos controlan la
contaminación ambiental? A las grandes industrias, pero… ¿ellas obligan a que se
consuman sus productos? A las instituciones educativas, pero… ¿ellas pueden
aportar a alguien que no quiere escuchar? Entonces… ¿de quién es la culpa?

La cuestión va más allá de identificar culpables, el punto está en eliminar los agentes
que llevaron a la humanidad a tal atrocidad. En tal situación, la educación es el mejor
camino para combatir o prevenir ésta catástrofe. Retrocedemos en el tiempo unas
cuantas décadas, ahora el mundo es diferente, está en desarrollo de este futuro
alternativo, aún se puede cambiar el curso del tiempo. Algo en lo que todo el mundo
trabaja.

En un recóndito rincón del planeta tierra, está la bella ciudad de Florencia Caquetá,
y en ella la Institución Educativa Jorge Eliécer Gaitán, preocupada frente al
inminente deterioro ambiental por la contaminación por los residuos sólidos
generados en la institución, le apuesta a impulsar un Programa de Gestión Integral
de Residuos Sólidos (PGIRS) con un enfoque ambientalista. A través de él, se
busca educar a la comunidad educativa acerca de la importancia de generar
estrategias que propendan por la clasificación, reutilización, organización, higiene,
disciplina y compromiso con los residuos sólidos que se producen.

Además, dicho programa ofrece la oportunidad de formar ciudadanos competentes

en el área y consientes del estado ambiental de su entorno, personas que
promoverán la conservación del medio ambiente y evitarán un futuro devastador.
Fortaleciendo de ésta manera las bases de una sociedad próspera y la
sostenibilidad del equilibrio de la naturaleza. Y recordándonos que el compromiso
es de todos, se lo debemos a la vida misma.
Carvajal Bastidas Darío
Cuéllar Rojas Liseth Tatiana
10°3