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Copiado en Resina + Termodinámica Espuria (II)

Hola.
Vamos allá con el tutorial definitivo sobre la copia de piezas en resina. Y digo definitivo porque
para mí este es el último nivel que quiero alcanzar en este campo. Lo máximo que creo que se
puede alcanzar con moldes de silicona de una pieza en el hogar, a nivel de maquetista.

Es la continuación de este artículo en el que presentaba mis métodos clásicos de fabricación de


moldes y copias a presión ambiente, así como los materiales y productos habituales:

http://www.network54.com/Forum/657050/m ... +en+resina.

Y también es la continuación del siguiente artículo en el que introducía las ventajas y limitaciones
de la bomba de vacío, la cámara de baja presión y las resinas lentas:

http://www.network54.com/Forum/657050/m ... ia+%28I%29

Así que doy por explicados esos temas y trataré de no repetirme mucho.

De lo que aquí se trata es del uso de una nueva herramienta: la cámara de alta presión, también
conocida como tanque de pintura, tanque de gotelé, etc.
Naturalmente no es una herramienta concebida para este trabajo, sino para aplicar pintura y otros
productos de acabado a pistola. Es por tanto una herramienta profesional del campo de la pintura,
que requiere de un compresor para funcionar.

Yo llevaba más de un año acechando un chisme de éstos. Casi desde que descubrí para qué servían.
Cuando las estrellas se alinearon y me vi con los fondos suficientes para comprar uno, en un golpe
de suerte detecté la subasta de un artículo sin usar en eBay. Me hice con él por la mitad de lo que
me hubiera costado de otro modo. Con gastos de envío y los acoples extra, casi 100. Menos de lo
que cuesta un aerógrafo de calidad.

Éste es el trasto con algunos de los accesorios que lo acompañaban:


Es básicamente una olla a presión con agujeros roscados en su maciza tapa.
En peso y dimensiones es de aproximadamente 1,25 gatos.
Todos los modelos cuentan con un tubito que llega hasta el fondo (1). Es para succionar la pintura
así que no lo necesitamos. De hecho es un estorbo que hay que eliminar. En este modelo es muy
fácil pues es sólo una cánula de plástico insertada a presión.

La tapa es sólida en comparación con la lata, para permitir roscar acoples y evitar deformaciones.
La clave está como siempre en estos chismes, en el sello de caucho (2) que se inserta en el borde y
asegura la estanqueidad de la cámara.

La disposición de acoples para esta función es mucho más simple que para pintar. No necesitamos
un regulador.

Yo tenía cuatro agujeros roscados de diferentes diámetros. En dos de ellos (3) coloqué llaves (una
con acople rápido y otra de rosca que me sobró de mi primer compresor). Puedo utilizar una para
llenar y la otra para vaciar.

En otro instalé la importantísima válvula de seguridad (4) que venía con el tanque. Se supone que
libera la presión al llegar a 50 psi, que es el límite de seguridad. Siempre hay que instalar una
válvula de seguridad, salvo que lo que queramos sea una bomba antipersonal.

Y en el último un manómetro (5) pequeño en el que marqué en rojo la presión de trabajo que quiero.

Todo con mucha cinta de teflón y bien apretado.


Y éste es el resultado final en posición cerrada y con el gancho que permite asir la tapa e incluso
colgar el tanque. Es bastante poco voluminoso.

El volumen interno es de unos 10 litros. Todos los modelos que he visto tienen al menos 4 puntos de
cierre a presión. Con menos, la tapa se deformaría dejando escapar aire.
Las tuercas se aprietan a mano y nunca se deben utilizar herramientas para forzarlas. Eso sí, hay que
aplicarse con brío para cerrar bien el tanque.

El concepto es muy simple y ya lo habréis adivinado. Se trata de llenar los moldes de resina y
meterlos dentro, cerrar, y elevar la presión antes de que la resina reticule. Si la resina no está líquida
cuando todo está hecho, no sirve de nada.

Por eso hay que utilizar resinas un poco lentas, como la Slow White o la Smooth Cast, con pot-life
de 5-10 minutos y desmoldeo a los 30-45 min.
Son resinas de poliuretano blancas, de muy buena calidad y ligeramente más blandas que las resinas
rápidas amarillas de toda la vida.

Con resinas rápidas amarillas se puede llegar a trabajar un único molde sencillo. Lo he comprobado
haciéndolo todo al sprint. Pero esa baja productividad no es plan.

Las resinas blancas dan tiempo de sobra para llenar varios moldes por tanda. Es importante como
siempre llenar meticulosamente los moldes, sin derramar la resina y sin llenarlos en exceso. Apretar
los moldes tras verter parte de la resina para extraer el aire es tan bueno como siempre y yo lo hago,
pero está de más en el caso de piezas sencillas.

Debido a que el fondo de estos tanques es cóncavo, debemos utilizar alguna plataforma plana para
que los moldes estén nivelados y no se derramen.
Un tupper redondo sin tapa es lo ideal. Permite introducir y extraer varios moldes de una sola vez,
ahorrando tiempo. Además la resina que se vierta se despegará con suma facilidad de su plástico.

Si habéis visto mi último tutorial, esta imagen os sonará. Modifiqué e insonoricé mi compresor de
calderín grande principalmente para esta misión.
La mejor alternativa para llenar un tanque de pintura es un compresor grande. El calderín de 25
litros se carga a los 6 bar para los que ajusté el presostato. Con el motor apagado basta con conectar
ambos depósitos. La presión en el calderín baja a poco más de 4 bar mientras que en el tanque de 10
litros aumenta a 3 bar.
Después se carga el calderín de 4 a 6 bar para otra tanda en unos 20 segundos.

Tengo el regulador de salida ajustado a la presión de trabajo para la resina de 3 bar, así que no tengo
que preocuparme por nada. Como utilizo manguera con acople rápido tampoco hay que usar llaves.
Desde que se conecta la manguera al tanque comienza a llenarse y no pasará de los 3 bar que hay en
el regulador del compresor. Cualquier ajuste para compensar las fluctuaciones de presión se hace en
el compresor.

Con la llave de entrada en posición abierta el aire comenzará a fluir desde que insertemos la
manguera. No interesa un torbellino dentro del tanque que pueda derramar la resina. Un tiempo de
llenado de unos 30 segundos es perfecto. El manómetro del tanque deberá marcar más o menos lo
mismo que el del regulador.

Basta con esperar en estas condiciones el mismo tiempo que tarda la resina en endurecer a presión
ambiente. No el tiempo de desmoldeo, sino el tiempo que tarda en solidificar, que es menor.
Entonces podemos desconectar la manguera y abrir las llaves para que salga el aire, antes de abrir el
tanque. De hecho es imposible abrir manualmente el tanque cuando está a presión.

Como en todas estas cosas que hace uno con cinta de teflón, hay fugas de aire imperceptibles. Por
eso interesa utilizar un compresor de calderín grande. La reserva de aire en el compresor
compensará las fugas manteniendo constante la presión de 3 bar, por lo menos hasta que el
compresor baje también a 3 bar, para lo que hace falta cerca de una hora en el mío.
Así todo puede hacerse en silencio. Pero también podemos dejar encendido el automático del
compresor, que arrancará el motor desde que la presión del calderín baje de 4 bar en mi caso.
Al extraer los moldes del tanque, listos ya para desmoldar o no, percibiremos que la superficie de la
resina es muy lisa y brillante y bastante cóncava, debido a la presión a la que estuvo sometida.

El aire presiona la resina a través del bebedero transmitiendo esa presión por la resina líquida a todo
el interior del molde. El molde se inflaría deformando la copia si no fuera porque la misma presión
se ejerce sobre las paredes exteriores del molde equilibrando el volumen de la copia.

Pero no hay que olvidar que la silicona es flexible y compresible. Mucha presión y la silicona se
encogerá, deformando y agrandando las copias. Dicen y he comprobado, que si no se pasa de 3 bar
o 45 psi de presión, las piezas no se deforman. De todos modos no puedo subir por encima de 50
psi.
También es cierto que si no se alcanzan al menos 40 psi, no sirve de nada.

En la siguiente foto puede verse lo que ocurre cuando se hace una copia a alta presión con un molde
hecho a presión ambiente. Todas las pequeñas burbujas en la resina que no se pueden eliminar
manualmente y que están cerca pero no en contacto directo con el hueco del molde, se inundan de
resina a presión que rompe la delgada pared de silicona.
Un molde que usando resina a presión ambiente no da problemas, se llenará de estas bolitas al usar
el tanque. No son difíciles de quitar, pero excluye el uso de este tipo de moldes con esta técnica.

Mucho más difícil es eliminar las burbujas cuando aparecen en negativo, en la resina.
Un viejo molde del filtro de un Spitfire de Tamiya que no tenía ningún fallo, sólo proporcionaba
copias plagadas de microburbujas (6) al usarlo a presión ambiente.
La razón está en el difícil punto de unión del bebedero, que además es bastante estrecho. La amplia
superficie superior del molde retiene las pequeñas burbujas de aire hagamos lo que hagamos
manipulando el molde, y son muy difíciles de masillar.

Pero en el tanque de presión esas microburbujas desaparecen de la vista porque son aplastadas al
transmitirles la resina la misma presión del depósito.
No he visto más microburbujas en copias hechas a alta presión, ni siquiera con resinas viejas que
tienden a espumar.

La presión elimina las burbujas pequeñas, pero las bolsas de aire no las puede eliminar ni expulsar
fuera del molde. De hecho lo que hace es empujarlas más adentro, pero reducirlas mucho de
tamaño.

Las bolsas de aire se pueden evitar como siempre con un buen diseño del máster y del bebedero y la
manipulación del molde durante el llenado. Pero en el caso de una pieza simple como bidones en
los que no hay recovecos, basta con verter la resina sin más.
De hecho modifiqué el máster para estrechar el bebedero y hacer más fácil y rápido su corte.

De decenas de copias con este molde, aún no he visto ni una burbuja para mi regocijo.
Ahora la prueba de nuevos moldes usando el tanque de presión.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que no es necesario que los bebederos sean tan
voluminosos, como cuando se hacen para llenado a presión ambiente y hay que intentar sacar el aire
manualmente.

Por primera vez he utilizado el diluyente para siliconas. El diluyente es el llamado aceite de
silicona. Yo tenía un resto del año pasado y las siliconas se espesan con el tiempo volviéndose
inútiles. Añadiendo el aceite (sin exceder el porcentaje al peso recomendado) se aumenta la fluidez
de la silicona, restaurándola.

Los moldes quedan más blandos y flexibles, lo cual es bueno para facilitar la extracción de piezas
complejas. Por contra son moldes más deformables.
Podemos jugar con distintos tipos de siliconas según el molde que queramos, pero yo encuentro más
práctico y económico comprar la silicona dura y ablandarla cuando lo necesite, con el aceite.

Los armazones de los moldes raramente van a caber en un tanque en posición vertical.
Para colocarlo de lado le fabriqué una cuna con recortes de poliestireno extruido.
Colocando un simple tablero de base, el tanque en posición horizontal proporciona mucho más
espacio.
Se pueden introducir moldes bastante grandes.

El procedimiento es el mismo y la presión para la silicona es la misma que para la resina.

PERO ESTO NO FUNCIONA ASÍ. Comparé moldes hechos en el tanque de presión con otros de la
misma pieza hechos en la cámara de vacío. La bomba de vacío extrae el aire que rodea al molde lo
que lleva al que está atrapado dentro de la silicona a expandirse. La silicona hierve, expulsa el aire y
es extraído por la bomba. Es un método invencible.
Los moldes hechos sólo presurizando la silicona presentan fallos de reproducción del detalle fino
porque comprimen el aire pero no lo expulsan.

Por lo tanto, la bomba de vacío sigue siendo imprescindible para obtener moldes de calidad. Es
especialmente indispensable si queremos moldes para usarlos dentro del tanque de presión. La
bomba de vacío es más importante que el tanque de presión.

Si conseguís la bomba de vacío, una campana es un problema nimio. Pero si también tenéis el
tanque de pintura ni lo necesitáis, ya que conectándole la bomba de vacío en lugar del compresor,
podéis desgasificar. Le podéis añadir también un vacuómetro al tanque o hacerlo de oído. La bomba
de vacío hace un sonido distinto cuando ya no puede sacar más.

Yo lo que hago es utilizar la campana de vacío para preparar los moldes como en el tutorial anterior.
Luego los paso por el tanque de presión, pero no varias horas hasta que la silicona reticule, sino
unos minutos para que la presión ayude a la silicona a llenar todos los recovecos y registrar mejor el
detalle fino.

El molde de esta pieza fue hecho con dicho sistema y las copias, parecen correctas, limpias y sin
burbujas.

Pero en realidad hay un cambio en las copias: son más gruesas.


La razón está en el incorrecto diseño del molde. Es una pieza plana, ancha y con una gran abertura
para el bebedero. Pero el fallo está en un molde demasiado fino, hecho con una silicona demasiado
blanda. Es un molde que produciría copias también un poco más gruesas que el original incluso a
presión ambiente.

Esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de hacer moldes para alta presión.
Ahora unas piezas muy exigentes, llenas de detalles finos, relieves complejos y finos salientes.

Molde sólido hecho a baja y alta presión. No se deformará.


Los moldes así con las piezas dispuestas en batería tampoco son ideales. Ahorran tiempo y silicona,
pero extraer el máster es difícil porque la silicona queda atrapada entre las hileras de piezas.
Al menos, después podemos rellenar los bebederos individuales sin unirlos, así que se pueden sacar
más fácilmente de uno en uno.
El resultado es fabuloso. Imposible de conseguir sin presión. He lavado la resina e imprimado para
que se pudiera apreciar el detalle.
Lo difícil de este molde es extraer los cilindros sin que se parta alguno de esos brazos, no llenarlo
totalmente como ocurría a presión ambiente.

Demostrado el potencial de la herramienta, veamos algunas aplicaciones prácticas más allá de la


simple multiplicación del original.

Estas resinas para los escapes del I-16 son una mejora con respecto a la maqueta de Eduard y hacen
más sencilla su instalación al venir sobre un bastidor.
He retocado el acabado de la resina masillando y lijando, y he sustituido uno de los escapes por
tubo de metal ya que a pesar de la protección que formaba parte del bebedero original, estaba
dañado.
Por desgracia estos escapes para 8 aberturas de capó sólo sirven para los modelos type 10 iniciales y
anteriores. Los modelos posteriores tenían los escapes de los dos cilindros inferiores modificados
para apañarse con 6 aberturas, y esa resina no se fabrica.

Utilizando los escapes de una copia, modifiqué el original. Así el copiado en resina se convierte en
una herramienta de scratch.

Los dos tipos de escapes, con sus bocas ahuecadas perfectamente reproducidas. El tanque de
presión reproduce esa clase de piezas huecas con bordes finos a la perfección.
Ahora un ejemplo de transformación.
De una rueda maciza en plástico inyectado extraigo la llanta lijando.
El neumático en resina negra es de un kit de detallado para otro vehículo.
Sólo hay que sustituir las llantas.

No hace falta trabajar el doble para hacer ruedas de izquierdas y ruedas de derechas.
Utilizando adhesivos de resinas acrílicas como Gatorgrip o Kristal Klear, la llanta se puede
despegar del neumático aflojando el adhesivo con agua tras hacer el primer molde. Se gira llanta y
se hace un segundo molde
Así con un único máster se fabrican dos piezas distintas transformadas.

Y de propina añado al molde una mejora hecha con partes de un cañón de resina, partes de la propia
maqueta y partes a scratch. La resina hiperbárica hace con facilidad todo tipo de cañones.

No todo el problema es conseguir llenar el molde. Después también hay que conseguir extraer la
copia sana, sin tener que romper el molde.

Estos contenedores de submuniciones presentaban un desafío por su gran volumen pero minúsculo
contacto entre la pieza y el bebedero. Además terminan en punta y tienen unas aletas fijas unidas al
bebedero.

Toda clase de abertura es inadmisible en un máster o no se podrá extraer la pieza.


Con el Kristal Klear se pueden sellar los huecos extendiendo el material para formar una fina
membrana.
Las copias no se podían extraer sanas del molde. O se partían por la unión con el bebedero o se
deformaban las aletas al forzar el molde.
Había que encontrar una forma de que la pieza se pudiera extraer tirando del bebedero linealmente,
sin partirla.

Utilicé un refuerzo de alambre de cobre que queda embebido tanto en la pieza como en el bebedero
al llenar el molde de resina.

De ese modo se pudieron extraer las copias intactas a pesar de la resistencia del molde y de las
aletas finas como papel.
Cortar el bebedero con una sierra fina sólo cuesta un poco más debido al hilo de cobre.
Otro tipo de resina que ensayé en un artículo anterior es la epoxi transparente. Tiene un tiempo de
trabajo extraordinario por lo que podemos desgasificar la mezcla tanto en el vaso como más tarde,
en el molde. Y es necesario porque es muy densa y atrapa mucho aire que después se verá, se
encuentre donde se encuentre.

Su densidad no me había permitido llenar totalmente este molde a presión ambiente, pero en el
tanque de presión la resina ha llenado el molde hasta la punta de los conos. De cuatro piezas sólo
una presenta una burbuja de aire.

Esto abre camino a un nuevo campo de aplicación de la resina en copia de transparentes.

Y de propina la siempre respetada prueba de las figuras. Cuando se pueden copiar figuras, se puede
copiar de todo.
Ya sé que toda esta parafernalia es bastante excesiva para el maquetista medio.

Yo he llegado a este punto gracias al interés de un grupo de maquetistas tan entusiastas de la resina
como yo. Y esta especie de cadena de montaje va a ser abastecida, explotada y disfrutada por un
grupo. Es sin duda una actividad para colectivos de maquetistas, ideal para clubes y asociaciones.

También hay que tener verdadero interés en este subcampo del modelismo, porque requiere bastante
disciplina si se quieren obtener buenos resultados. A mí me ha fascinado desde que intenté hacer
moldes de maskol y escayola y copias de resina termofusible.

Resumiré lo esencial.
En cuanto al MATERIAL
- Resina lenta blanca
- Compresor de calderín
- Bomba de vacío
- Tanque de pintura o gotelé que soporte 3 bar
- Acoples y manguera
- Algo plano como un tupper
- Y el resto de productos, recipientes, útiles para mezclar e instrumentos de medida comunes a todas
las formas de copiado.

En cuanto al METODO

- Utilizar moldes de silicona hechos en cámara de vacío


- Fabricar moldes gruesos y poco deformables
- Extraer las bolsas de aire grandes al verter la resina
- Presurizar a 3 bar llenando el tanque no demasiado deprisa
- No extraer hasta que la resina haya tenido tiempo de reticular
- Preparar todos los elementos y planificar los pasos con anterioridad para llegar a la presurización
en el menor tiempo posible
- Añadir a las medidas de seguridad en el manejo de sustancias tóxicas, la precaución con un
recipiente potencialmente explosivo

Esto es todo. Parece un rollo y un montón de esfuerzo. Pero afrontado como una parte más de este
hobby, es muy satisfactorio y los beneficios a largo plazo, incontables.

Ric.

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