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Relevancia de la ética en la praxis psicológica

La ética y política en la psicología son el estudio y unión de las cinco dimensiones que

componen este paradigma entre las cuales están (ontología, epistemología, metodología, ética

y política). Dicho de otra manera la ontología se centra en el individuo y su objetividad en la

interacción individual y grupal en el medio en el que este se desenvuelve; con respecto a la

epistemología son los métodos a investigar acerca del conocimiento del individuo, mientras

que la metodología se encarga de trabajar sobre la teoría ya planteada para realizar la

intervención, en el caso de la ética se habla del juicio del bien y del mal, para observar el

conocimiento y comportamiento de las personas, por último la política se plantea como un

todo en el conocimiento de las leyes, esto quiere decir que son un conjunto de todas las

normas, cultura, símbolos lenguaje para observar el conducta. Por consiguiente estas cinco

dimensiones se relacionan para crear un modelo donde se puedan identificar las concepciones

del individuo en un todo, frente al medio en el cual están relacionados.

De este modo se puede decir que estas cinco dimensiones son fundamentales para el

quehacer psicológico, en tanto que se basan principalmente en el comportamiento humano,

dándonos un gran sin número de herramientas con las cuales se pueden asentar una serie de

teorías para poder investigar y analizar en atención a la problemática planteada y con ello

poder brindar una solución más oportuna según el caso que se está estudiando o interviniendo.

Se genera varias dimensiones frente a un paradigma en el cual se realiza la concepción

del individuo o sujeto cognoscente, como una concepción del mundo en que vive y de las

relaciones entre ambos. Esto supone un conjunto sistemático de ideas y de prácticas que rigen las

interpretaciones acerca de la actividad humana, acerca de sus productores (Munné- 1989- habla
de un modelo del hombre), de su génesis y de sus efectos sobre las personas y sobre la sociedad,

señalando modos preferentes de hacer para conocerlos (Montero, 1993).

Se habla como la relación entre el pensamiento y la realización de esa idea que

identifica al individuo. Dentro del paradigma generado se encuentran tres áreas: ontología,

epistemología y metodología.

Dentro de estas formulaciones se evidencia la preocupación de los autores por la ética y

la política y como tienen una vista errónea frente a lo que realmente significan para el individuo.

La ética interviene un papel fundamental en una profesión y va ligada de terminología

como lo es la ontología a la cual hace referencia al estudio de los deberes que deben ser

cumplidos en el ejercicio de una profesión u ocupación.

La ética genera importancia a nivel social ya que permite regular comportamientos entre

los individuos de esta forma, en el oficio del psicólogo con gran relevancia se interpreta la

función de manejar conceptos entre los cuales se diferencia el bien del mal.

Todo ser humano se rige por el cumplimiento de unas normas las cuales garantizan una

sana convivencia, ahora en función del psicólogo la ética permite que se regule el accionar del

psicólogo y la forma en que genera sus diferentes intervenciones.

La ética y la moral tienen bastante conexión pues cada una se complementa, ya que un

individuo debe tener características únicas las cuales hacen ser una persona moralmente

intachable, pero no necesariamente éticas, así las cosas, cada uno de los conceptos cómo lo es la

moral se deriva de una serie de códigos morales válidos, aceptados o consensuados por una

sociedad. Los principios morales regulan los comportamientos de diferentes grupos sociales (eso

está bien, eso se puede, eso no...), y la ética, está por encima de la moralidad, pues no obedece de
las buenas costumbres sociales, las personas que actúan de manera ética, lo hacen de acuerdo a

valores independientes de cada individuo de acuerdo a su formación, derivando comportamientos

de la vida de cada uno los cuales reflejan la responsabilidad hacia otras personas (no voy a robar,

no matar...).

En conclusión, la ética es aplicada en cada aspecto de nuestro actuar incluido el profesional, sin

embargo aunque es tan relevante la debida implementación de esta estructura, es desechada por

varias personas, no es tenida en cuenta y esto se puede observar en las noticias diariamente

cuando sale algún titular de mal actuar profesional, por ejemplo en los últimos años se ha hecho

pública la denuncia de médicos que falsifican documentos entre ellos el título profesional para

ejercer la medicina, también profesionales que se han visto involucrados en carteles de

contratación entre otros.

Sin importar que beneficios se puedan obtener a corto plazo, es importante que cualquier

profesional tenga presente que cuando se actúa indebidamente olvidando todo lo que la ética

implica, siempre va a tener consecuencias negativas, en el caso del psicólogo y otros

profesionales que trabajan con la salud de los seres humanos, estaría causando daños

irreversibles en el cuerpo y la mente de ellos.

Referencia

Montero, M (2001) Ética y Política en Psicología: Las dimensiones no reconocidas. Athenea

Digital - num. 0: 1-10.

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