Palabras A Los Graduandos

19 de Enero de 1999
Judith Valencia

Lo primero es lo primero.
Gracias, muchas gracias.

Con la decisión de ustedes queda la huella del paso de Judith Valencia por
la Escuela de Economía de la Universidad Central de Venezuela.

Gracias, muchas gracias.

Pero también, la decisión de ustedes le está diciendo no al pensamiento
único, porque han escogido el camino de abrir las entendederas.
Pienso, que es tiempo de recreación filosófica, tiempo propio para pulsar
deseos que preñen de sentido a los humanos sin derechos, tentando el
imaginario de los pueblos, en esta situación crítica, que pretende sujetar a
hombres y mujeres moldeándolos bajo prácticas sociales de control.
Revisemos el acontecer reciente,
Un hecho político insólito, pero real, aconteció el sábado 16 de enero 1999
en la ciudad de Barquisimeto. En la reunión anual de la Convención
Nacional de Gobernadores, el Embajador de los Estados Unidos se
inmiscuyó en asuntos internos, revelando su que hacer político y con ello
el del gobierno que representa. Las palabras del Sr. John Maisto son un
signo de la importancia que reviste para el hemisferio americano el
proceso político en Venezuela.

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Veamos qué dijo:
Expresando su opinión para la convocatoria de la Asamblea Constituyente
sostuvo que: “para que el cambio constitucional sea aceptado y entendido
fuera de Venezuela, y para que tenga bases firmes y duraderas, debe
contener tres principios básicos. Primero, debería tener lugar dentro de un
marco democrático, constitucional y legal. Segundo, debería garantizar la
continuidad de la institucionalidad democrática y todas las libertades que
los venezolanos tan celosamente guardan. Tercero, debería ser producto
de la negociación, del compromiso, y si es posible, del consenso. El
cambio constitucional conducido de esta manera…será aceptado
inmediatamente, tanto regional como internacionalmente”
Con esto, tomo partido de las posiciones no-chavistas.
Pero continuó diciendo: “…la única manera de entender la política aquí es
salir y hablar con los gobernadores, alcaldes, obispos y otros líderes
locales y regionales…”
Dejando con ellos evidencias de que se reúne y hace política con
gobernadores, alcaldes, obispos y otros. De donde podemos inferir de su
confesión y presencia en la Convención, que el Sr. Embajador y con él su
gobierno, mucho tuvieron que ver con el bloque de gobernadores
apostando a Salas Romer. Inferencia, que se valida, cuando Globovisión
transmite a continuación de la Convención, las opiniones de Uslar Pietri y
Salas Romer reunidos el día anterior.
Y concluye su intervención con una estocada: “participé en la II Guerra
Mundial y apoyé el derrocamiento de gobiernos dictatoriales en Filipina,
Panamá y Nicaragua”.
Metió miedo y reveló la intervención de los Estados Unidos en problemas
internos de otras naciones.
¿Qué dijo? Dijo, soy guapo y estoy apoyado. Si el Presidente Chávez, no
hace, lo que dice mi gobierno que debe hacer, los gobernadores con los

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suyos y los míos, declararemos el proceso inconstitucional, por tanto,
podremos actuar como lo hicimos en Panamá y Nicaragua.
¿Por qué los Estados Unidos, en palabras públicas del Embajador habla
tan claro?
Digo, que este hecho político insólito, pero real es signo de la importancia
que reviste el proceso constituyente en/desde Venezuela.
El debate constituyente viene ocupando a los pensadores en filosofía
política durante la últimas tres décadas.
El proceso constituyente no es invención venezolana. NO. Y sólo así se
entienden los detalles importantes del proceso.
Veamos.
Desde la recesión económica de 1967, cundió la alarma, abriendo tiempos
de una prolongada onda crítica, signada por una madeja de relaciones de
fuerzas, en la que el capital financiero transnacional pugna por darle carta
de identidad a un orden mundial, expresado con crudeza y magnitud en el
Proyecto del Acuerdo Multilateral de Inversiones (AMI). Lo que es proyecto
para el globo es ya en parte Acuerdos para el hemisferio americano.
Los gobernantes de las Naciones de las Américas (con excepción de
Cuba) firmaron un acuerdo Marco de Integración Hemisférica, en la
Cumbre de las Américas, Miami diciembre de 1994. De ese Acuerdo
Marco han surgido líneas de acción política bilaterales y hemisféricas ya
en marcha. Leyendo lo que está en marcha, responsablemente sostengo,
que avanzan en la dirección estratégica de elaborar una Constitución
Hemisférica. Deberes y Derechos Hemisféricos que vacían de sentido
aspectos fundamentales contenidos en las Constituciones Nacionales.
Es por esto que los partidarios de la Constitución Hemisférica están de
acuerdo con la necesidad de formular nuevas Constituciones Nacionales,
que sean el resultado de reformar las actuales, vigentes, inútiles para la
estrategia; las Constituciones Nacionales reformadas se amoldarán a los

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requerimientos de acoplamiento que exige la Constitución Hemisférica en
marcha.
Ante tan magna misión, el Embajador de los Estados Unidos corre el
riesgo de hacerse activo visible en el proceso de cambios constitucionales.
Por eso, tiene que combatir cualquier proceso constituyente que se atreva
soberanamente a soñar, deseando y trabajando por refundar la República.
Proceso, que permitiría la insurgencia de un poder constituyente en el que
el pueblo reviva el concepto de soberanía absoluta, desde donde se
organice laboriosamente-trabajando y decidiendo- sobre qué, por qué,
para qué vivir y trabajar. El proceso de construir un poder social
constituyente no puede tener apoyo de los sectores que apuestan a la
Constitución Hemisférica.
Es esa la dimensión del conflicto en que estamos inmersos.
Si el proceso del poder social constituyente toma cuerpo en los
venezolanos, Venezuela estaría en condiciones de unir fuerzas con otros
esfuerzos latinoamericanos que vienen mostrando deseos de recrear la
vida de sus pueblos. Venezuela podría encaratar el proceso hemisférico.
Podría unir fuerzas con Chiapas/México, con los Sin Tierras/Brasil, con el
revivir de los Desaparecidos/Argentina, con los pobladores colombianos
que habitan en territorios liberado por las guerrillas, con las diferencias
que afloran a propósito del caso Pinochet/Chile. Y llegando lejos, el
espectáculo Clinton está indignado a estadounidenses moviendo el piso,
surcando grietas.
Toda esta fortaleza contraria al Orden Transnacional por la Constitución
Hemisférica era impredecible en diciembre 94.
Cosa grande, Venezuela se sumaría con todo y Presidente.
Presidente, quién no es cualquier personaje que debe tener de cabeza a
los que se ocupan de estudios de comportamientos para poder infiltrar la
conducta del Presidente.

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Los descubrimientos también nutren a las ofensivas estratégicas. A prueba
actual me remito: el juicio a Clinton, buscando, encontraron el punto débil
y por allí lo agarraron.
La Antropología Política pone de manifiesto cualidades de los pueblos, sus
pobladores, sus culturas. Llegando a configurar maravillosos imaginarios
culturales. Esta línea del pensamiento nos recuerda que Hugo Chávez es
zambo y cimarrón (negro/indio/llanero) quien ascendió hasta alcanzar la
Academia-Militar y Universitaria-. ¿Sintetizará su personalidad el rugir de
tan vastos sectores?
Recordemos someros puntos de inflexión de la ofensiva de los Estados
Unidos sobre el hemisferio americano.
Mucho tuvo que ver con la derrota de Bolívar, la Doctrina Monroe de 1823.
En los primeros años del Panamericanismo-entre 1889 y 1933- la historia
reconoce 33 invasiones al territorio latinoamericano. La política de New
Deal cambia la estrategia de invasión abierta por la invasión encubierta
firmando acuerdos de Reciprocidad Comercial. Los tiempos iniciales de la
Guerra Fría les brindará el instrumento de la Doctrina Anticomunista,
política que conjuntamente con la Alianza para el Progreso y la
contrainsurgencia acorralara a las fuerzas de resistencia, neutralizando los
frentes nacionalistas que proponen un desarrollo económico
independiente. El desenvolvimiento de la experiencia militar brasileña
desde mediados de los 60´s hasta entrados los 70´s les brindará la
oportunidad de diseñar un dispositivo de inteligencia perversa: la Deuda.
De allí en adelante, los préstamos engrosaron la deuda, dispositivo que
conjuntamente con las políticas de Ajustes irán proponiendo la política
“salvadora” de convertir la deuda en inversión, enmascarando las
inversiones extranjeras directas. Llegando a los 90´s las economías
latinoamericanas le pertenecen a la deuda. El espacio económico y la
soberanía política queda cautiva. Solo queda cambiar el régimen de

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inversión directa extranjera por conversión de deuda en inversión
privatizadora de las industrias estratégicas estatales. El capital financiero
transnacional fragmenta el territorio nacional creando enclaves
transnacionales e incorporando los recursos naturales a las cadenas
productivas transnacionales y así avanzan buscando apoyarse en la
descentralización política del territorio nacional. Divide y vencerás.
Solo que esa ofensiva deja fuera un vasto contingente de pobladores,
quienes un día pueden plantearse refundar repúblicas en los territorios no
invadidos por el capital transnacional y desde allí, por qué no, inventar
maneras de vivir sin dejarse atrapar en la miseria que siembra la
transnacionalización.
Menudo conflicto les toca vivir o presenciar. Es decisión personal escoger
el lugar desde donde actuar.
¿Entonces?
No es cualquier tiempo, el que el azar les brinda, como fecha para egresar
de esta casa de estudios.
Salen de aquí preñados de nuevos tiempos porvenir.
Solo les pido mantener abiertas las entendederas, para que no se dejen
sujetar sin consentimiento, por los cantos de sirena.
Yo, mientras pueda, estaré aquí pescando eventos, impregnando de
sentido el acontecer mundial de cada día.
Gracias por permitirme compartir con ustedes y los suyos, un paso más en
sus vidas, que es también la mía y la de ésta: nuestra universidad.
Hasta siempre y gracias una vez más.