Tácticas educativas para emplear con un

niño Asperger

Programa de Integración Escolar

Colegio República de Siria
Ñuñoa 2019

El síndrome de Asperger no es una enfermedad mental, por lo que los
expertos recomiendan que los niños se eduquen dentro del sistema junto
a otros que no tengan las mismas necesidades, ya que junto a ellos podrán
enriquecerse de manera mutua. Tratar a personas diferentes, llegar a
entenderlas y respetarlas, es una lección de vida, sin duda, para cualquier
niño o niña.
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Los niños y jóvenes Asperger tienen un gran potencial, suelen poseer una
memoria fabulosa, una gran capacidad de concentración centrada, eso sí, en
intereses muy limitados y hasta un vocabulario extenso. Sin embargo, es muy
común que estas habilidades se vean eclipsadas por sus dificultades: escasa
habilidad social, extrema sensibilidad sensorial, falta de atención, problemas
a la hora de comprender y bloqueo para pedir ayuda, son solo algunas de
las características del niño con Asperger cuando está en sociedad y más
concreto en la escuela.
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Para un profesor tener en el aula a un niño con Síndrome de Asperger es
un reto diario que requiere de total colaboración por parte de los padres y, en
la escuela, la de un educador de apoyo quien será fundamental para poder
organizar y evaluar resultados, mediante una atención más personalizada sin
descuidar al resto de la clase.
Algunos de los tips que se deben tener en cuenta tanto dentro como fuera del aula
son los siguientes:
 Calma : El proceso de adaptación no es rápido. El profesor
debe conocer a su estudiante para que pueda sentirse seguro, y eso puede llevar
unos meses. Cariño, buen humor y mucha serenidad son imprescindibles para tener
éxito.
 Tranquilidad : Evitar ruidos y situaciones estresantes para el
estudiante. Mientras más tranquila sea la clase, menos estrés tendrá. Si necesita
estar aislado trabajando solo en algún momento hay que facilitarle la posibilidad.
 Inclusión : Es muy importante como profesor contagiar al resto de
la clase la paciencia y el respeto por el estudiante con Asperger. Si los demás ven
que los adultos tenemos un comportamiento tranquilo sin perder los nervios ellos nos
imitarán.
 Flexibilidad : Es necesario en algunas ocasiones rebajar la
exigencia porque el estudiante no es estable emocionalmente, igual un día está
receptivo y colaborador, u otro tiene ansiedad y se muestra más huraño. Además le
cuesta escribir por tiempo prolongado y tiene dificultades con las tareas, por lo cual,
por ejemplo, se le puede permitir que las realice de forma oral si se le complican por
escrito.
 Tiempo : Las prisas no son buenas para nadie pero menos para
ellos. Les provocan ansiedad y se bloquean, no pueden ni escuchar ni entender. Sí,
tardan más que los demás en comprender o en reaccionar, ¿y qué? no pasa nada.
Es su tiempo y para que se mantenga tranquilo y abierto a instrucciones hay que
saber medirlo.
 Planes alternativos : Debemos hacer que sepa que a veces puede cambiar
la rutina por algún imprevisto. Si esto llegara a pasar es necesario que sepa qué plan
nuevo se va a ejecutar. Por ejemplo, en caso de lluvia no salimos al patio pero
armamos puzles en clase.
 Rutinas : Crear y enseñarle rutinas diarias en la escuela es
básico. Escribirlas, tenerlas a la vista, mostrárselas según se realizan, lo tranquiliza y
le da seguridad. Siempre debe saber qué va a pasar después y conocer los pasos
que debe seguir: cambiar de sala o de mesa, sacar otro libro, relajarse entre clases.