SANTO ROSARIO MISTERIOS GOZOSOS

 V. ¡Ave María purísima!

R. ¡Sin pecado concebida!
†
 En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amen.
Este Rosario lo ofrecemos por el eterno descanso del alma de nuestra hermana Yanela en los brazos del
Señor Jesús.
†
 Por la señal de la santa cruz, de nuestros enemigos...

 Señor, Tú nos la habías dado para que fuera nuestra compañía y nuestro consuelo y ahora la has
llevado a tu lado. Te la devolvemos sin quejas y aunque nuestros corazones están desgarrados por el
dolor, aceptamos tu santa voluntad. Tú nos la diste, Tú te la llevas. Amén.
 Creo en Dios Padre Todopoderoso,…..
 Pésame, Dios mío, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido.
Pésame por el infierno que merecí y por el cielo que perdí pero mucho más me pesa, porque pecando ofendí a
un Dios tan bueno y tan grande como Vos. Antes querría haber muerto que haberos ofendido; y propongo
firmemente no pecar más y evitar todas las ocasiones próximas de pecado. Amén.

PRIMER MISTERIO
1. La anunciación del ángel a la virgen María
 Se reza 1 Padre Nuestro y
 10 Ave María
 El Gloria
 V/ Gloria al Padre, Gloria al Hijo, Gloria al Espíritu Santo
R/ Como era en un principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

 V. Oh Jesús mío, perdona nuestras culpas, líbranos del fuego del infierno, lleva al cielo a todas las
almas, especialmente a las más necesitadas de tu misericordia.
 V. Dale, Señor, el descanso eterno.
R. Y brille para ella la luz que no tiene fin.
 V Que el alma de nuestra hermana Yanela descanse en paz.
R. Así sea
SEGUNDO MISTERIO: La visita de María a su parienta Isabel
TERCER MISTERIO: El nacimiento del Hijo de Dios
CUARTO MISTERIO: La presentación del Niño Jesús en el templo
QUINTO MISTERIO: El niño Jesús perdido y hallado en el Templo

 Para finalizar, Sagrada Virgen María, vamos a rezarte las tres Avemarías y la Salve.

 ORACIÓN FINAL
Te rogamos, Señor, por el Espíritu Santo que santifica a todos tus hijos, que permitas que nuestra hermana
Yanela obtenga la abundancia de tu perdón y se vea libre del sufrimiento del purgatorio.
Te rogamos, por la intersección de la Santísima Virgen María, de San José y de todos tus ángeles y santos,
no recaigas sobre ella la severidad de tu juicio. Haz que disfrute pronto del premio eterno de tu reino, y
que así como en esta vida imitó a tu Hijo en el sufrimiento, lo imite también en el gozo de la vida eterna,
donde esperamos encontrarnos todos un día para hacerte compañía por los siglos de los siglos.
A ti también, Virgen María, te pedimos que intercedas por ella, que la bendigas como hija tuya que
continua siendo. Protégela en ese nuevo mundo al cual acaba de llegar y condúcela siempre al Padre
eterno. Todo esto te lo pedimos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.