CONCLUSIONES

En el estudio de la electroestática se pudo observar y comprender el efecto de la electrización mediante

varios sucesos físicos, donde este es el producto de ganar o perder cargas eléctricas. Estas cargas
contenidas en la materias denominadas positivas (protones) y negativas (electrones) normalmente
están distribuidas por todo el cuerpo. Referente a esto, se nota que cuando dos cuerpos cargados
eléctricamente se aproximan el uno al otro, aparecen fuerzas que los atraen o los repelen, dependiendo
de cómo sean las cargas de los dos cuerpos.

Si ambos cuerpos están cargados con cargas del mismo signo (+ o -), la fuerza que aparece en ellos es de
repulsión, es decir, que tiende a separarlos y si ambos cuerpos poseen cargas de signo distinto, uno con
carga positiva y el otro con carga negativa, la fuerza que aparece entre ellos es de atracción, es decir,
que tiende a juntarlos.

A su vez, existen cuerpos polarizados que tiene igual número de electrones y protones, pero están
orientados. Es decir, las moléculas tendrán la carga positiva hacia un lado y la carga negativa hacia el
opuesto. Y así el resto de moléculas. Pero seguirá habiendo la misma carga positiva que negativa. Esto
se debe a que al acercar un material con una baja conductividad eléctrica a un cuerpo electrizado (por
ejemplo, con carga positiva), la carga de este último actuará sobre las moléculas del aislante, haciendo
que se orienten y alineen. En un cuerpo eléctricamente cargado no, habrá un exceso de una o de otra.

Para realizar los experimentos, recomendamos primeramente ser cuidadosos al momento de cambiar
de material en el pivote ya que este al encontrarse en desequilibrio se cree que inmediatamente se está
generando atracción o repulsión, a su vez, utilizar un aislante en ciertos experimentos y por último que
el generador de Van de Graaff sea totalmente funcional.