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Todos los derechos reservados y se acoje en un todo a la Ley 23 de 1982, artículo 32.
ISBN 978-958-8646-10-7
A Elena Navar ro
El estudio del derecho como una especial clase de hechos sociales…
lleva en el plano filosófico a la elaboración de una culturología jurídica…
a una doctrina del derecho como objeto cultural, y en el plano empírico
conduce a una historia del derecho (descripción de realidades
jurídicas particulares) y a la sociología del derecho
(investigación sobre tipos y regularidades de los fenómenos jurídicos)
Luis Recasens Fiches. Tratado general de filosofía del derecho.
Prólogo 17
Presentación 21
Introducción 25
Capítulo 1
El orden de los libros jurídicos
Capítulo 2
Legitimidad e interlocución en los textos jurídicos
Capítulo 3
Togados y letrados: el orden de los juristas en la ciudad letrada
Capítulo 4
Historiografía para una bibliografía jurídica del siglo XVIII
Capítulo 5
El papel del jurista entre España y el nuevo mundo
Capítulo 6
Los libros y la formación de los abogados neogranadinos
Capítulo 7
La élite de los juristas neogranadinos frente a la cultura del libro
Capítulo 8
Planes de Estudios para los abogados neogranadinos
Capítulo 9
Algunos manuales para el estudio del derecho
Capítulo 10
Los libros jurídicos hacia el virreinato neogranadino
Capítulo 11
Hacia un corpus material de libros jurídicos neogranadinos
Capítulo 12
Hacia un corpus ideal de libros jurídicos
Conclusiones 277
Bibliografía 283
To ga d o s y L e t ra d o s
16
ANEXOS
Anexos Documentales
Anexo 1
Biblioteca de la Compañía de Jesús 299
Anexo 2
Real Biblioteca de Santafe 306
Anexo 3
Biblioteca del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario 325
Anexo 4
Biblioteca de la Orden de Predicadores 351
Anexo 5
Documento sobre el exceso de abogados 354
Anexo 6
Relación de los méritos y circunstancias del Dr. Don Francisco
Antonio Moreno y Escandón 362
Anexo 7
1767 Univerisdad Javeriana: inventario de sus bienes 367
Anexo 8
Solicitudes de abogados ante la Real Audiencia de Santafé 371
Anexos de Imágenes
Anexo 1
Imágenes de textos jurídicos 375
Por las anteriores razones esta investigación expresada en este libro, hace
posible una primera aproximación a la economía del capital cultural, desde lo
jurídico en Colombia. Situación que en últimas reta la ignorancia que tenemos
de nuestro pasado, presente y futuro, que en materia legal en ocasiones nos hace
pobres ante la ley e indigentes con la justicia.
Tomando como marco de referencia los trabajos sobre la cultura del libro
europeo del historiador francés Roger Chartier, en especial, los conceptos de
lector, autor y biblioteca, que este propone, reconfiguramos para este trabajo las
nociones de libro, lecturas (lectores) y bibliotecas. Con esas ideas exploramos entre
los registros de circulación material las prácticas jurídicas y la legislación sobre
el mundo de los abogados en España y sus colonias de ultramar. Igualmente,
desde esos conceptos se revisó la formación de una biblioteca ideal con un
corpus de libros que, creemos, fueron consulta obligada para todo el que se
formara en el derecho o ejerciera como tal en los tribunales y ante las diferentes
instituciones donde se requería su concurso. Pero sobre todo, nos acercamos a
una identificación de los aportes que tuvo todo ese ideario en la formación de
los juristas, en la construcción de una conciencia ilustrada con la que luego sería
To ga d o s y L e t ra d o s
28
Al lado de los trabajos de Roger Chartier hay que señalar cómo los
aportes del sociólogo colombiano Renán Silva han sido inspiradores de esta
relectura sobre fuentes secundarias y la elaboración de juicios de valor sobre
unas primarias, en torno a las bibliotecas y la construcción de saberes. Los
trabajos de Silva sobre la ilustración en el Nuevo Reino de Granada son el
antecedente documental más completo, sin embargo, en sus indagaciones no
se puntualiza sobre las bibliotecas jurídicas.
A lo largo de sus capítulos, esta obra permitió una puesta en limpio de una
revisión de fuentes bibliográficas con las cuales se pueden elaborar nuevos
trabajos de caracterización sobre la cultura del libro jurídico en el periodo
colonial, en términos generales y de manera especial en la Nueva Granada, para
llegar a hacer propuestas sobre los flujos discursivos de los libros. Además, abre
la puerta para destacar estos acervos bibliográficos, como textos con una gran
capacidad para la formación de un ideario social, que aporte nuevas luces a los
procesos de construcción de una identidad jurídica nacional.
El aporte más significativo que queremos hacer con este ejercicio exploratorio
es ofrecer a la comunidad académica una obra de consulta y referencia en la que
se ha sistematizado un corpus material de libros jurídicos que circularon en la
colonia neogranadina –algunos más allá del periodo propuesto– y se postula
un corpus ideal, para abrir el debate y la sana disertación en torno al tema
de la Cultura del Libro y su importancia para configuración de la conciencia
ilustrada de la sociedad occidental, como campo de relación y encuentro de los
estudios sociológicos, historiográficos y jurídicos. Para que a partir de un estudio
cualitativo de fuentes se avance hacia estudios cualitativos sobre los libros, los
lectores y las bibliotecas jurídicas colombianas.
Saber qué leían los abogados y los estudiantes de derecho permite recuperar
los discursos en boga, las tesis centrales para la justificación y aplicación de
ciertas instituciones y su validación como derecho positivo o vigente. Pero sobre
todo, permite revisar y avanzar en futuros trabajos sobre las concepciones que
tanto en la perspectiva de la filosofía del derecho, de la historia del derecho, de
la sociología jurídica y de la filosofía de la educación, nos ofrecen un panorama
realista de la formación de los abogados y de los ilustrados en general. La
condición de letrado, será el punto de partida para esas aproximaciones, porque
en el periodo de estudio, es decir en el siglo XVIII, ser letrado era condición
básica que caracterizaba a un jurista. Decir jurista era igual a decir letrado.
1
Hemos dejado de lado una serie importante de nombres y referencias en torno al tema de la cultura del libro,
para centrarnos en Chartier, sus nociones de libro, lector y biblioteca. Pero sin duda una obra paradigmática
para cualquier estudio sobre esta materia es el texto de los franceses Lucien Febvre y Henrí-Jean Martin
denominada La Aparición del libro, en su versión francesa “la Apparion du livre” editada en 1958, Francia: Albín
Michel. Ella ofrece un panorama completo sobre el surgimiento del libro desde el texto manuscrito al impreso,
con sus problemas de circulación, edición en el mundo europeo.
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33
Uno de los trabajos de Chartier que más luces aportan a esta investigación
sobre la cultura del libro jurídico en Colombia, es sin duda la obra titulada El
orden de los libros. Lectores, autores, biblioteca en Europa entre los siglos XIV y XVIII,
no solo porque se inscribe en el periodo de estudio, que en nuestro caso es el
siglo XVIII, sino porque hunde sus raíces en los siglos anteriores, sin los cuales
el recorrido entre el libro manuscrito y el impreso no se configura.
2
Cfr. la obra completa de Chartier sobre la cultura del Libro Europeo y en especial en la Francia del antiguo
régimen. Valga destacar que en la obra los trabajos han superado el recuento cuantitativo de las fuentes
documentales, porque en buena parte los archivos de libros, y de bibliotecas se encuentran revisadas. Obras: El
mundo como representación. Estudios sobre historia cultural (1992), El orden de los libros. Lectores, autores, bibliotecas
en Europa entre los siglos XIV y XVIII (1992), Espacio público, crítica y desacralización en el siglo XVIII (1995), Las
revoluciones de la Cultura escrita (2000), La historia o la lectura del tiempo (2007) entre otras publicaciones sobre
la cultura del libro.
3
Los trabajos sobre la cultura del libro en España, han demostrado un interés y una fuerte tradición historiográfica
bibliográfica, una muestra son las numerosas referencias que se citan a lo largo de esta investigación que tienen
su origen en importantes universidades españolas como Salamanca, o la Complutense de Madrid, entre otras.
4
Roger Chartier. La historia o la lectura del tiempo. Barcelona: Gedisa, 2007, pág. 13.
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En el primer ensayo distingue los ejes básicos de toda la historia del libro: los
textos, como contenido por esencia del libro, los libros como continente material
o físico que llega al lector, y las prácticas o usos que de los textos pueden hacer los
autores. Identifica el libro como una estructura material y a la lectura o legibilidad
como aquella que relieva “el sentido de las formas”, es decir, el formato de los
textos, su presentación, compaginación e incorporación de imágenes, entre
otros. Resalta las variaciones en la disposición de los lectores y los dispositivos
textuales y formales que llevan a una amplia gama de lecturas en los textos.
Combate la historia cuantitativa del libro en Francia y las concepciones sobre
cultura popular y sabia. Supera el paradigma cuantitivista sobre la lectura basado
en las preguntas ¿quiénes? y ¿cuántos? Para pasar a un segundo momento en
donde se agregan las preguntas: ¿qué se lee? Identificando las obras y ¿cómo se
lee? En función de las prácticas de lectura.
Inventariar los títulos, clasificar las obras, dar un destino a los textos, fueron
operaciones gracias a las cuales se hacía posible el ordenamiento del mundo de
lo escrito. De este inmenso trabajo, realizado con gran inquietud, son herederos
directos los tiempos contemporáneos. En efecto, en aquellos siglos decisivos,
cuando el libro copiado a mano va siendo progresivamente reemplazado por el
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35
5
Roger Chartier. El orden de los libros. Lectores, autores, bibliotecas en Europa entre los siglos XIV y XVIII.
Barcelona: Gedisa, 2000, pág. 21.
6
Ibíd., pág. 19.
7
Ibíd., pág. 20.
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36
Las obras no tienen un sentido fijo, estable o universal, ellas están cargadas de
significaciones que dependen de los sentidos, las competencias, las expectativas,
y los esquemas mentales y afectivos que les atribuyen los públicos, o las
comunidades en el marco cambiante de las culturas. En el encuentro entre una
propuesta textual y su recepción, según Chartier, la recepción inventa, desplaza
y distorsiona.
De manera que, los estudios sobre los alcances que la cultura del libro ha
implicado para la formación y destrucción de los órdenes sociales, es una tarea por
hacer, en muchos grupos sociales que todavía están por identificar los procesos
de construcción de su identidad. La circulación de saberes es esencial para la
puesta en marcha de sistemas económicos y políticos, con los que las sociedades
legitiman sus estructuras y las sostienen en el tiempo, en ese proceso juega un
papel esencial el concurso de los diferentes colectivos que la integran y su interés
por conocer en profundidad como está construida su identidad, aunque muchos
no siempre están conscientes de las formas de perpetuación de los poderes, ni de
las redes discursivas que los traspasan y los determinan. Las culturas se edifican
desde un orden discursivo y se reconfiguran desde las lecturas y relecturas de las
redes textuales que consolidan dichos órdenes.
Por otra parte, las lecturas son las formas de apropiación y de recepción de
textos y la manera como eran leídos, es decir, interpretados de acuerdo con los
procedimientos del establecimiento, su inclusión o exclusión en el imaginario
8
Ibíd., pág. 20.
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38
de los diferentes grupos o elites que detentan la autoridad. Dichas lecturas son
realizadas por los lectores como sujetos reales o discursivos hacia los que dirigía
potencialmente el discurso, en el sentido de Patrick Charaudeau, los seres del
circuito de la palabra configurada en el texto o los creadores y los destinatarios
generales de dicha producción en el mundo real9. La lectura es el proceso de
apropiación, por parte del lector de las referencias contenidas en los libros como
decantación de saberes.
9
Patrick Charaudeau. ¿Comunicación o enunciación? Aspectos Generales del análisis semiolingüístico del
Discurso. Julio Escamilla, En: Revista Glotta. vol. 2 no. 1, (enero/abril) 1987.
10
or el alcance de este trabajo y su cronología, no hemos hecho mención a todo el movimiento de glosadores que
fundó la cultura jurídica occidental hasta bien entrado el siglo XVI, pero remitimos al trabajo de Carlos Ignacio
Jaramillo: El Renacimiento de la Cultura Jurídica en Occidente. El derecho en el medioevo siglos XI-XV, 2004, por
considerarla el más significativo de los trabajos sobre la Escuela de Glosadores y su papel en la formación de
una tradición jurídica en Europa y en el nuevo mundo.
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39
una relación en la que no todos los sujetos pueden decirlo todo. En el mundo
colonial es claro que hay dos instituciones que se abrogan el control sobre lo que
debe decirse: la iglesia y el rey, y son conocidos los controles a la circulación del
saber, desde el famoso Index Librorum Prohibitorum, que bajo la mirada tutelar
del Tribunal del Santo Oficio, se encargaba de actualizar periódicamente los
libros prohibidos y controlar el influjo de las ideas heréticas y contrarias a la
doctrina y magisterio de la Iglesia Católica. Pero en el caso de las Cédulas reales
con las que se ejercían controles sobre el comercio y circulación de libros hacia
las indias se controlaban todas las doctrinas heterodoxas a la majestad Real y a
su poder omnímodo, sobre todo en las obras que desarrollaban teorías sobre la
legitimidad del poder monárquico.
el derecho penal buscó cimentarse en una teoría del derecho y cómo hacia el
siglo XIX se sustentó en el saber sociológico, psicológico, médico y psiquiátrico
para validarse. En el siglo XVIII la tradición jurídica todavía está fundada en la
teoría del derecho románico y en especial de las corrientes del derecho canónico.
Por otro lado, están los llamados procedimientos internos que actúan como
principios de clasificación, distribución y ordenación de los discursos. Apuntan
a revisar los relatos que en las sociedades son contados y repetidos y cómo en esa
transmisión pueden cambiarse o alterarse. En este sentido existió el Comentario
sobre los discursos fundacionales o creadores, que son los que se repiten,
comentan y glosan. Es claro que en la tradición del derecho el comentario tiene
estatuto propio en la Escuela de los Glosadores12, que durante siglos se encargó de
perpetuar la capacidad prescriptiva de la norma del derecho romano que entra
en el mundo hispánico. El comentario tiene como función decir lo que está dicho
silenciosamente: “allá lejos”, y explicitar los sentidos ocultos: “decir por primera
vez lo ya dicho”13.
12
Op. cit. Carlos Ignacio Jaramillo. Cap. III El “despertar” de la Cultura Jurídica. Génesis y consolidación de la
Escuela de los glosadores (siglos XI-XIII)” en especial el empleo de otros géneros jurídico-literarios diversos de
la glosa: Las summas (sumae, summa o sumulae), las dissensiones dominorum, las distinctiones, las cuestiones
disputata, las monografías, las casus, las regulae iuris (generalia, brocarda, brocardi, brocardica o locarda) los
commenta, entre otros.
13
Ibíd., pág. 24.
14
Ibíd., pág. 25.
15
Una obra clave para la revisión del proceso del formación del derecho común (ius comune) es el libro de Barlomé
Clavero, denominado Historia del Derecho: derecho común, Salamaca: 1994, que se ocupa de hacer un recorrido
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42
Las tareas del investigador consisten en trazar una indagación que cumpla con
exigencias, que están basadas en: el principio de trastrocamiento, para reconocer el
juego negativo y el enrarecimiento, el principio de discontinuidad, para abordar
los discursos como prácticas discontinuas que se cruzan y yuxtaponen, ignoran y
excluyen; el principio de especificidad que asume el discurso, no como un juego de
significaciones previas sino como un objeto sujeto a revisión en su propio contenido;
por la tradición jurídica desde el llamado Utrumque ius como antecedente del Ius comune, en su primer capítulo
“Utrumque ius: Derecho civil y derecho canónico, consolidación de los textos. Los estudios jurídicos y la
formación de un derecho común. La obra de los juristas”, en donde se refleja claramente que el derecho común
es obra de la doctrina desarrollada por los textos conocidos de “derecho civil” y de “derecho canónico” a partir
de la obra de los glosadores y los comentadores.
16
Ibíd., pág. 34.
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43
Ello supone un nuevo plan de revisión discursiva que en el caso del análisis
sobre el proceso de formación de los abogados neogranadinos apunte a buscar
elementos como los acontecimientos que rodearon el proceso, la serie de eventos
que iban perfilando un discurso sobre la juridicidad de tipo civil por oposición a
la canónica, la regularidad en los procesos de circulación en virtud de las prácticas
de estudio y las profesionales, así como la posibilidad de significación –porque
estamos en terreno de la polifonía de referencias aun cuando se postulara una
unidad en las voces–.
17
Ibíd., pág. 45.
Capítulo 2
Legitimidad e interlocución
en los textos jurídicos
1
Una versión de este texto fue publicada en la Revista Nueva Época, con el título La legitimidad de los Interlocutores.
El problema de las formas de autoridad en la producción de Discursos jurídicos. Mónica Fortich, número 29, año XIII,
2007. El texto pretendía una aproximación con algunos elementos de la teoría sociológica que tendrían que ser
considerados para complementar la perspectiva historiográfica de los estudios sobre la cultura de libro. Valga advertir
que la disertación teórica operaba como un marco teórico descontextualizado del contexto histórico del periodo de
estudio, pero cuyos elementos están presentes a lo largo de la investigación. En especial, las nociones de texto y discurso
necesarias para comprender la circulación discursiva de los textos jurídicos y la idea del orden social que configuran.
2
El plan que se propone en este texto, es una aspiración que se desarrollará en una fase posterior a la indagación
descriptiva y explicativa, de este trabajo; que intenta hacer las veces de un inventario de referencias, o bien para
un estudio de las fuentes del derecho; para pasar a un análisis de la idea de los libros jurídicos y los discursos
–que con ellos se construyen y se difunden socialmente–.
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47
Más allá de una categorización por etapas históricas de la génesis del orden
jurídico, es necesaria una reconfiguración de los textos (producciones de sentido)
y los discursos (redes textuales) de la juridicidad colombiana. Es necesaria una
reconstrucción del origen y de la legitimidad de los discursos académicos sobre
el derecho, desde los cuales los interlocutores de ese campo se nutren y crean sus
propias referencias conceptuales. El campo se forma como un sistema cerrado
de auto referencias que los miembros de un grupo social comparten y que les
delimita sus habitus –o prácticas– y les define su autonomía.
3
Cfr. con la obra del sociólogo colombiano Álvaro Moreno Durán y sus aportes investigativos para documentar
la formación del campo socio jurídico en Colombia, a partir de los planteamientos de la obra de Pierre Bourdieu.
4
En esta primera fase del trabajo el objetivo consistía en identificar y organizar los textos materiales que
estuvieron disponibles para el proceso de formación de los juristas, y en un segundo momento se revisaran los
contenidos (lo que hemos llamado Lo narrado-referido) en varios grupos de textos para poder configurar un
sentido de Discurso en la circulación de dichas obras.
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48
Los diferentes textos son los soportes de las voces que intervienen en un
discurso y tienen en consecuencia un origen múltiple, porque están sustentadas
en saberes de la sociedad y son fruto de una cultura con la que el individuo
5
Carlos Fuentes. Terra Nostra. Barcelona: Seix Barral, 1973.
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49
Bien sea que se trate de una comunidad de sujetos con intereses afines o de
un evento de comunicación entre extraños o de un acto de lenguaje generador
de un conflicto entre sujetos con intereses antagónicos o incluso entre sujetos
6
Es desde esta idea desde donde se construye la noción de elite, en tanto un grupo social que comparte una
base común, desde donde funda la legitimidad y desde donde la proyecta. Los ilustrados del siglo XVIII, son
un ejemplo de formación de campo con alto grado de restricciones y presunciones sobre el otro, con el que
construía comunidad.
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50
7
Un contrato comunicativo se puede definir como el acuerdo de voluntades de los sujetos (locutores) que
participan en un evento –circuito comunicativo a la manera de Jakobson–, comprometiéndose a respetar
las reglas básicas de las enunciaciones de la interlocución. Escamilla, Julio. ¿Comunicación o enunciación?:
Aspectos generales del análisis semiolingüístico del discurso En: Revista Glotta. Bogotá, Vol. 2 no. 1, enero/abril
(1987). De la mentira y otras estrategias discursivas. En: Revista Glotta, Bogotá; vol. 4 no. 1 enero/abril (1989).
8
Emile Benveniste. Problemas de lingüística general. El aparato formal de la enunciación Tomo II, México: Ed.
Siglo XXI, págs. 84-85.
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51
Entre los diversos enfoques que sirven como fundamento a esta exploración
teórica sobre el tema de la “legitimidad de los interlocutores del derecho”, se
encuentran las nociones de discurso desde el análisis del profesor colombiano Luis
Alfonso Ramírez, el análisis de las formas y orden del discurso de Michel Foucault, y
nociones de poder simbólico y campo en Pierre Bourdieu, entre las más importantes.
Con base en ese modelo se propone una conceptualización para tres aspectos
centrales de esta disertación, ellos son: Legitimidad, interlocución y discurso. La
legitimidad es entendida como el sentido de autoridad para hablar y escribir,
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52
bien sea a nombre o voz propia o invocando voces presentes y/o ausentes. Como
soporte de la teoría y la praxis de una ciencia o disciplina, como condición de
validez intrínseca de los argumentos textuales y de validez extrínseca de su
aceptación por un colectivo o grupo social y como presupuesto de una tradición
conceptual. La legitimidad se asimila a la idea de presupuesto o base común como
condición y reconocimiento de validez de lo enunciado y de quien locuta.
Michel Foucault introduce su texto El orden del discurso con una disertación sobre
las voces que preceden su propio acto discursivo, planteando el juego permanente
entre el deseo de querer entrar en un orden discursivo libre de tensiones, porque es
una institución quien se lo permite o se lo niega. Por tal razón, en las enunciaciones
orales y escritas a las que están compelidas diariamente las voces de los sujetos que
anteceden a la voz comunicante, parecen expresarse a otras voces, unas veces de
forma nítida, otras veladas o deformadas. La confianza de una voz es producto del
reconocimiento por una institución. En Foucault, según él mismo lo expresa, están
otras voces como la de Dumezíl, Hippolite, Hegel e incluso Nietzche, entre otros
filósofos, que propusieron un orden para el discurso:
que tienen por función conjurar los poderes y peligros, dominar el acontecimiento
aleatorio y esquivar su pesada y terrible materialidad9.
9
Op. cit., Foucault. El orden del discurso. Barcelona: Tusquets, 1987, pág. 6.
10
Cfr. Con la obra de Umberto Eco especialmente con Obra abierta (1962), Apocalípticos e integrados ante la cultura
de masas (1965), La estructura ausente (1968), La forma y el contenido (1971), El signo (1973), Tratado de semiótica
general (1975).
11
Con base en los diferentes planteamientos de los autores citados, propusimos nuestra idea de referentes
vivenciales, enciclopédicos y los conceptos de autoridad civil y contractual asociados a ellos.
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54
Ibíd.
12
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55
El discurso, por más que en apariencia sea poca cosa, las prohibiciones que
recaen sobre él, revelan muy pronto, rápidamente, su vinculación con el deseo y
con el poder. Y esto no tiene nada de extraño: ya que el discurso –el psicoanálisis
nos lo ha mostrado– no es simplemente lo que manifiesta (o encubre) el deseo;
es también lo que es el objeto del deseo, y ya que –esto la historia no cesa de
enseñárnoslo– el discurso no es simplemente aquello que traduce las luchas o
los sistemas de dominación, sino aquello por lo que, y por medio de lo cual se
lucha, aquel poder del que quiere uno adueñarse13.
13
Ibíd., págs. 11-12.
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56
de una obra; y que hemos llegado a sorprender, esta palabra del loco, incluso en
lo que nosotros mismos articulamos, en ese minúsculo desgarrón por donde se
nos escapa lo que decimos14.
El otro mecanismo de concesión, está dado por una autoridad de carácter civil o
secular producto del consenso de intereses y de contratos sociales, que se plantean
en sociedades donde se ha hecho una ruptura con un orden trascendente y se ha
entregado la potestad al juego de las libres elecciones entre los más fuertes del
grupo. El discurso en ellos actúa como mecanismo de administración del poder
material y del simbólico. Bien sea en el caso de discursos apoyados en el poder civil
o del religioso, es claro que la autoridad reside en las fuentes y se expresa a través
de los individuos que por designio o designación lo ejerzan. Algunos ejemplos
elementales: un sacerdote, un rey tribal, un monarca, un chamán, un cacique, un
jeque (que para efectos de autoridad son lo mismo) recibe el poder de una fuente
divina y es ratificado por un consejo o cenáculo que refuerza la fuente.
15
Hemos propuesto las nociones de concesión de autoridad en civil y religiosa, así como los referentes afectivos y
enciclopédicos.
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58
Las formas de control discursivo que ejercen los modelizadores del campo
operan en el derecho como en cualquier otra ciencia. Los ejemplos son elementales
pero significativos: el científico, cuyas investigaciones han sido validadas por una
comunidad científica, va acumulando el poder que le confiere su reconocimiento
y se puede colocar a la cabeza de su campo, más tarde tiene el poder de validar
a los colegas, en tanto se muestren dispuestos a seguir difundiendo sus ideas,
a menos que ese mismo campo valide una nueva expresión o paradigma. Ello
operó de la misma manera en el siglo XVIII que en la revolución científica del
siglo XIX. Las elites del mundo colonial neogranadino obedecieron a la misma
lógica.
16
Pierre Bourdieu. Las reglas del arte. Génesis y estructura del campo literario. Barcelona: Paidós, 1997, pág. 338.
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60
En otros casos menos evidentes ¿cómo negar tal dependencia autoritaria más
allá de los roles que se desempeñen? ¿Un presidente de una república o un virrey
no estarán siempre mediados por su investidura? ¿No dirán siempre un poco de
lo que sus asociados, electores o súbditos quieren oír? ¿No se sentirá compelido
a decir de acuerdo con los intereses que representa? En ese mismo sentido un
escritor –comentador o autor– de libros jurídicos se mueve dentro de los límites
socioculturales que su campo fijó en un momento histórico.
consagración. En el caso del campo literario que revisó en las Reglas del arte (1997)
señala cómo funciona esa facultad para nominar dentro de un campo:
(...) cada cual trata de imponer los límites del campo más propicios a sus
intereses o, lo que es equivalente, la definición de las condiciones de la auténtica
pertenencia al campo (o unos títulos que den derecho al estatuto de escritor, de
artista o de científico) más adecuada para justificar que sea como es17.
17
Ibíd., pág. 331.
18
Ibíd., pág. 333.
19
Álvaro Moreno Durán y José Ernesto Ramírez. Pierre Bourdieu. Introducción Elemental. Bogotá: 2003, pág. 21.
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62
dicho que las concesiones de autoridad son posibles desde el reconocimiento del
otro que enuncia. Se trata de las representaciones comunes y compartidas por
los agentes del campo y de acuerdo con ellas los lugares o posiciones tanto de
dominantes como de dominados, son asumidas:
Ibíd.
20
Pierre Bourdieu. Sobre la televisión. Barcelona: Anagrama, 1996, pág. 27. Aunque en la época colonial no se
21
diera este tipo de estructura mediática, es bien cierto, que el nacimiento de la prensa, bien sean periódico, hojas
volantes o incluso pasquines, va generar un proceso de movilización social y va a contribuir al mantenimiento o
cuestionamiento del orden simbólico sobre el cual las ciudades coloniales se construían.
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63
Esta parte es la primera versión del texto, con algunas reformas, que fue publicada en la Revista Nueva Época,
22
pretende, además, una reflexión sobre la legitimidad en un plano oral, tanto como en uno escrito. La posesión
de los textos concedía autoridad a quienes los detentaban y es el proyecto de exploración sobre la circulación
discursiva, desde los textos en general y en particular de los jurídicos.
Capítulo 3
1
Ángel Rama. La ciudad letrada. Montevideo: Arca, prólogo de Hugo Achucar, 1998, pág. 21. Presentamos una
síntesis de los tres primeros capítulos de la obra por su ubicación histórica hasta finales del siglo XVIII.
2
Cfr. los conceptos de Rama con la obra de José Luis Romero. Latinoamérica; las ciudades y las ideas. Y en especial
con los capítulos referencias a las ciudades coloniales (ciudades patricias).
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67
Como no era posible para ese momento cambiar las urbes europeas, las
tierras vírgenes de ultramar fueron una oportunidad para empezar de cero,
negando todas las culturas existentes aquí y en principio trasponiendo el
pasado de los recién llegados. A las ciudades las regirá “una razón ordenadora
que se revela en un orden social jerárquico transpuesto a un orden distributivo
geométrico”. Sociedad y ciudad requerían un proyecto previo y sobre todo
un Orden, y la forma física de la ciudad, existe para que la distribución de su
espacio asegure y conserve la forma social, un régimen de transmisión del
poder de España a América:
El orden debe quedar estatuido antes de que la ciudad exista, para así impedir
todo futuro desorden, lo que alude a la peculiar virtud de los signos de permanecer
inalterables en el tiempo y seguir rigiendo la cambiante vida de las cosas dentro
de rígidos encuadres. Es así que se fijaron las operaciones fundadoras que se
fueron repitiendo a través de la extensa geografía y un extenso tiempo3.
Las ciudades emergían de las normas con que se las teorizaba. Las actas
fundacionales y los planos, se materializan en las urbes que cumplen la concepción
griega “barbarie-civilización”, que oponía la polis civilizada, a la barbarie de los
no urbanizados. Los campesinos ibéricos serán compelidos a ser los hidalgos
en la nueva organización, tendrán un título nobiliario (don) y dejarán de
3
Ibíd., pág. 21.
4
Ibíd., pág. 23.
To ga d o s y L e t ra d o s
68
trabajar la tierra para esclavizar a los indios que lo harán por ellos. Un afán
de riqueza calificado por Rama como el nuevoriquismo, permitió la explotación
despiadada de los esclavos y promovió la suntuosidad y el despilfarro. A las
ciudades les correspondió dominar y civilizar su entorno, mediante dos acciones:
“evangelizar” por un espíritu religioso y luego “educar” mediante uno laico y
agnóstico, transculturando los valores de la sociedad europea:
5
Ibíd., pág. 27.
6
Ibíd., pág. 31.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
69
7
Ibíd., pág. 32.
To ga d o s y L e t ra d o s
70
Su cercanía con el poder les permite conocer mejor los mecanismos y las
conveniencias de la institucionalización. Ellos podían modificar el tipo de
mensajes que emitían, en nombre de dichas instituciones: Sin alterar su condición
de funcionarios sirven a un poder y –a su vez – son dueños de él. El letrado sirve
a la ciudad letrada, en tanto contribuye con su acción a idealizarla, a proyectarla
y conservarla más allá de su materialización y hacerla vivir por encima de las
modificaciones que introduce el hombre común en su cotidianidad. De hecho,
en el tercer capítulo que nos ocupa, previa una reflexión del papel que jugaron los
juristas, letrados al servicio del poder real, el autor configura la ciudad escrituraria,
que reverenciaba y sacralizaba el poder de lo escrito.
Así como la ciudad letrada articuló su relación con el poder a partir de leyes,
reglamentos, proclamas cédulas y la propaganda ideológica para justificarlas y
legitimarlas, la escrituraria generó el culto por la letra, que durante la colonia se
expresaba, esencialmente, en Cédulas y durante la República en Constituciones:
Fue evidente que la ciudad letrada remedó la majestad del Poder, aunque
también puede decirse que éste rigió las operaciones letradas inspirando sus
principios de concentración, elitismo, jerarquización. Por encima de todo,
8
Ibíd., pág. 35.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
71
9
Ibíd., pág. 43.
10
Ibíd., pág. 44.
To ga d o s y L e t ra d o s
72
cruces étnicos que no se identificaran con indios ni con esclavos negros. Por otra
parte, el anillo de los grupos de lenguas indígenas y africanas, que bien podían
estar en guetos urbanos o en las zonas rurales. Valga destacar que los vínculos
de la ciudad escrituraria eran más cercanos con el anillo urbano, a pesar de que
querían distanciarse de él.
Carlos Altamirano (Director), Jorge Myers (editor). Historia de los intelectuales en América latina. La ciudad
11
letrada, de la conquista al modernismo. I. El letrado colonial. Gente de Saber en los virreinatos de Hispanoamérica.
Buenos Aires: Katz Editores, 2008, pág. 54.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
73
Los españoles fueron únicos en dictar las leyes y hacerlas respetar en el nuevo
mundo, es decir, en un espacio por demás distante de aquel donde se hacían, para
aplicarse y ampliarse desde las audiencias, el consejo de indias o los virreinatos
en el nivel local. Todo ello hace del derecho un saber y una práctica dominante:
12
Ibíd., pág. 54.
To ga d o s y L e t ra d o s
74
13
Ibíd., pág. 64.
14
Guillermo Hernández Peñalosa. El Derecho en Indias y en su metrópoli. Bogotá: Editorial Temis, 1969, pág. 467.
15
Ibíd.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
75
mientras que para ser delegado solo dieciocho, salvo que el rey nombrara al
primero y las partes de común acuerdo al segundo, siempre y cuando fuera
mayor de 14 y menor de dieciocho:
Para ser juez letrado se necesitaba contar con más de veintiséis (como el que
fungiese pesquisidor o relator en el Consejo, en audiencia o en chancillería),
cuya diferencia de edad con la del lego se explica por la obligación del último
de tener la susodicha especie de asesor. Además se necesitaba haber estudiado
en cualquier universidad de los reinos españoles (residiendo en ellos) derecho
civil o canónico por diez años. La aceptación del cargo sin tales requisitos
inhabilitaba para él y para otros16.
El saber jurídico fue esencial para la organización política y social de las Indias,
y estará basado en un orden normativo y jurisdiccional de gran sofisticación
y poca movilidad. El poder del rey estaba legitimado en un orden espiritual,
coadyuvado por la iglesia, al tiempo que estaba respaldado y vinculado al saber
jurídico en el que confluía su potestad temporal.
16
Ibíd., pág. 468.
Capítulo 4
Historiografía
para una bibliografía jurídica
del siglo XVIII
1
Para ampliar los marcos cronológicos sobre el virreinato y los alcances de su jurisdicción se puede revisar la obra
de Ricardo S. Pereira. Documentos sobre los límites de los Estados Unidos de Colombia. Bogotá, 1883. Cita la Real
Cédula de Erección del virreinato de 27 de mayo de 1717, y la Real Cédula de extinción de noviembre 5 de 1723,
así mismo la segunda erección mediante la Real Cédula de reelección del 20 de agosto de 1739, de San Idelfonso.
To ga d o s y L e t ra d o s
78
No se puede desconocer que la mayor parte de los trabajos sobre “el libro”,
bien sea sobre su historia y cultura, giran en torno a temas como la historia de la
educación o la historia de las ciencias. Es significativo destacar algunos estudios
que desde esas perspectivas históricas, de forma indirecta, han revisado los cuerpos
de libros y la forma como ellos han influido en la formación del pensamiento
ilustrado y de una conciencia nacional que promoviera la independencia de las
colonias frente a la metrópoli española.
2
Renán Silva. Los ilustrados de Nueva Granada 1760-1808 Genealogía de una comunidad de interpretación.
Medellín: Banco de la República - EAFIT, 2002. Cfr. Con la toda la obra de Silva relacionada con la formación
del pensamiento ilustrado en la colonia neogranadina.
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79
3
Ibíd., pág. 17.
4
Ibíd., pág. 18.
To ga d o s y L e t ra d o s
80
De acuerdo con Silva en la segunda mitad del siglo XIX los autores de las
historias sobre la literatura nacional, abordaron el problema de la tradición
cultural española y se apoyaron en lo que los actores del proceso llamaron
Ilustración, desde la segunda mitad del XVIII. De manera que la interpretación
dominante desde entonces fue la José María Vergara y Vergara según el cual los
grandes cambios de comienzos del siglo XIX son fruto de las ideas ilustradas
de José Celestino Mutis (1760), con la introducción de la filosofía moderna,
lo que permitió un movimiento de cambio en las ideas y que se convierte en
cauce para la independencia.
Por otra parte, cita los estudios de Jaime Jaramillo Uribe, como una nueva
versión del problema que surge a finales de los años 50 del siglo XX, de la
compleja relación entre ilustración y la independencia poniendo énfasis en
otros elementos de orden político, filosófico y teológico que tenían lugar en la
ideología de la independencia, pero relacionando el proceso ilustrado local con
el de España. Jaramillo abordó su trabajo desde el enfoque de la historia de las
ideas, lo que para Silva que hoy se puede apreciar como limitado para un estudio
de problemas como la “circulación, difusión y apropiación de una cierta doctrina, ni
la extensión del campo de análisis al estudio de un sinnúmero de “prácticas ilustradas”
(…), porque alejan al investigador de la cultura como es vivida y tal como se la
representa día a día por los grupos sociales que pueden participar de manera
práctica de un movimiento de “ideas”5.
5
Ibíd., pág. 20.
6
Ibíd., pág. 21.
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81
7
Ibíd., pág. 22.
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82
8
Alfonso Gallo-García. Manual de Historia del Derecho español. (tomo I) El origen y la evolución del Derecho
Español, pág. 9. En ejercicio de la interdisciplinariedad esta investigación hace referencia a los trabajos de
los historiadores de la cultura en el siglo XVIII, y de los historiadores del derecho. La limitación conceptual
nos obliga a citar autores canónicos y plantear el contenido de las obras en un esfuerzo por aprovechar las
cronologías para presentar un marco teórico elemental. Es necesario un estado del arte más elaborado sobre la
historiografía jurídica y desde ella la cultura ilustrada y la circulación de los libros.
9
Ibíd., pág. 9.
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83
10
Ibíd., pág. 11.
11
Ibíd., pág. 12.
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84
En una breve revisión de los contenidos de cada uno de los libros de la Historia
del Derecho Español, se puede apreciar un esbozo de la historia de la metrópoli,
que reproducimos para esta investigación como una síntesis de esa cronología
de una historia política y jurídica de España, al interior de sus fronteras, con
sus vecinos y sus colonias ultramarinas. Se destaca en la obra la cronología que
parte desde las remotas relaciones de la hispania con el Imperio romano, hasta
la primera mitad del siglo XIX. En la relación de contenidos tenemos: En el
libro primero la descripción del Gobierno Imperial de España y el estado de la
misma bajo la dominación Romana, las costumbres de los Godos primitivos, la
fundación de la Monarquía española, el código de Eurico rey Godo, el oficio
palatino de los visigodos y la Corrección del Código Euriciano por Leovigildo,
el Concilio de Toledo, el Fuero Juzgo y un análisis de sus instituciones, el derecho
eclesiástico y la configuración de la monarquía Goda.
en el Gobierno Feudal, una nueva forma a las Cortes, las variaciones del derecho
eclesiástico español, la doctrina sobre la sujeción del clero a la potestad civil, la
resistencia de los españoles a la nueva jurisprudencia ultramontana, el gobierno
de San Fernando y el surgimiento de obras como el Decreto y las Decretales.
Para terminar en el libro cuarto con una descripción del lastimoso estado
de la monarquía cuando comenzaron a gobernar Fernando e Isabel, con una
nueva planta en el Consejo Real y nuevos códigos, las leyes de Toro, los conatos
de la nobleza para recuperar sus antiguos derechos, el reinado de Carlos V, las
comunidades de Castilla, las nuevas leyes sobre recursos de fuerza y retención
de Bulas, así como los proyectos de las cortes del siglo XVI para abreviar y
disminuir pleitos.
Valga destacar en este libro los capítulos dedicados a la enseñanza del derecho
español, en especial las Nuevas órdenes del Consejo para la enseñanza del derecho
español, y el fomento al estudio del derecho Público y español en el reinado
de Carlos III. Al tiempo que resumen la historia jurídica española, permiten
comprender ciertos cambios definitivos en la circulación discursiva, sobre la
legitimidad del poder y su proyección en las colonias. De hecho la introducción
de doctrinas y libros o su censura, atenderá a las contingencias políticas y a la
difusión o no de las mismas.
Entre otras obras que pueden citarse está la Historia del Derecho Real de España
de Antonio Fernández Prieto y Sotelo, editada en Madrid, en Imprenta de
Antonio Sanz, en 1738, que recoge la historia de algunas de las leyes primitivas
y costumbres de los españoles, el fuero antiguo de los Godos, la restauración de
la monarquía y el gobierno de Alfonso X con la institución del Fuero Real y las
Siete Partidas. En una breve revisión del contenido de los tres libros se destaca: en
el primero los orígenes remotos de los pobladores de España en un descendiente
12
Juan Sempere y Guarinos. Historia del Derecho Español. Barcelona: Imprenta de D. Ramón Martín Indar, 1847,
págs. 5-6. Edición con nota biográfica del autor: “D. JUAN SEMPERE Y GUARINOS, nació en Etda, villa
del reino de Valencia, el dia 8 de abril. Estudio gramática, retórica, filosofía y jurisprudencia en el seminario y
universidad de Orihuela, y en el Colegio de S. Isidoro de Murcia, graduado de doctor en teologia y bachiller en
canones, paso la practica del abogado en la ciudad de Valencia, de donde en 1782 se trasladó á continuarla en
Madrid. Recibido de Abogado en el Consejo, entró á ser secretario de la casa y estado del marqués de Villena,
y en 1788, fue nombrado por S. M. para la fiscalía de la chancillería de Granada, y en atención á sus meritos
se le dieron los honores del Consejo de hacienda, en 27 de junio de 1803, la real academia de la historia lo
nombró académico correspondiente, y en 16 de julio de 1812 le pasó á la clase de los supernumerarios. Con
motivo de la guerra de la independencia fue nombrado Sempere Vocal de la Junta de Granada, siendo uno
de los mas celosos defensores de su patria contra la invasion de Bonaparte; pero invadida aquella ciudad se
vio forzado á jurar por rey á José, como lo hicieron á escepcion de uno, todos los togados sus compañeros.
Continuó en su oficio de Fiscal motivo por que se le siguieron muchos trabajos en Madrid, como fueron
cárceles y mortificaciones, hasta que vueltos los franceses a aquella corte le pusieron en libertad; precisado á
seguir al intruso José en su salida; y sin pensar que podía llegar el caso de dejar á España, se vió confinado en
Francia. Allí suspirando siempre su amada patria no cesó de servirla con la pluma, publicando algunas de sus
producciones, vuelto a España y habiendo logrado de la piedad del rey nuestro señor una pension suficiente,
vivió retirado en la Villa de Elda su patria, donde murió” (págs. 7-8). Textos tomados de la edición facsimilar
de la Biblioteca de Cataluña. Del mismo autor también se puede citar para efectos de mirar la producción
bibliográfica española en el reinado de Carlos III, la obra Ensayo sobre una biblioteca española de los mejores
escritores del reynado de Carlos III. Madrid: Imprenta Real, 1785-1789.
To ga d o s y L e t ra d o s
88
La obra de Antonio Fernández gozó de gran acogida y fue sin duda una
referencia para Sempere, quien en principio creyó solo poder hacer el mismo
barrido cronológico de su antecesor, sin embargo, este último lo excedió en sus
alcances como a otros manuales de historia publicados durante el siglo XVIII. En
su dedicatoria al rey Felipe V (El Animoso) Fernández, expresa las limitaciones
de su empresa y el deseo de hallar los orígenes del derecho monárquico y unificar
los estudios anteriores al suyo, en los que a su juicio no existía claridad sobre el
autor (autores) de las normas y los méritos (léase también los errores) para su
promulgación:
Cfr. con el estudio de Santiago Castro Gómez. La postcolonialidad explicada a los niños. Bogotá: Universidad
13
Javeriana, Instituto Pensar., 2005, pág. 52 en su aparte sobre el discurso de la limpieza de sangre hace referencia
a la construcción cristiana medieval, y el fortalecimiento del dogma cristiano de la unidad fundamental de la
especie que hace a toda la especie humana descender de la casa de Adán, apoyada en la idea greco-romana de
la Orbis terratum, que dividía al mundo en tres grandes regiones donde se asentaron los hijos de Noé (Europa,
África y Asia), con privilegio de la primera: “las tres regiones geográficas eran vistas como el lugar donde se asentaron
los tres hijos de Noé después del diluvio y, por lo tanto, como habitadas por tres tipos completamente distintos de gente.
Los hijos de Sem poblaron Asia, los de Cam poblaron África y los de Jafet poblaron Europa. Las tres partes del mundo
conocido fueron ordenadas jerárquicamente según un criterio de diferenciación étnica: los asiáticos y los africanos cayeron
en desgracia frente a su padre, eran tenidos como racial y culturalmente inferiores a los europeos, descendiente directos de
Jafet, el hijo amado de Noé” (pág. 53). Con ello se da origen a un discurso de superioridad racial que es el origen
lejano del eurocentrismo dominante, y que en España es el fundamento de la legitimidad de poder monárquico.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
89
difícil encontrarlas; pero ya las nota mi fatiga unidas Algunos no ignoraban los
legales Decretos, aunque antiguos; y pocos eran los que sabian quienes fueron
los Señores Reyes, que las establecieron. Oy (si mi aplicación no se ha engañado)
reconoce el publico en las de cada Soberano lo excelso de su merito, que estaba
lastimosamente confundido, y indignamente usurpado14.
14
Antonio Fernández Prieto y Sotelo. Historia del Derecho Real de España. Madrid: Imprenta de Antonio Sanz.
1783. Transcripción de la edición facsimilar de ese fecha. Se ha respetado la ortografía del original sin las (s)
sibilantes ni el acento circunflejo en los casos donde aparece.
En las trascripciones que se harán a lo largo de este estudio se tomó como referencia el llamada transcripción
lineal o antigua, en el contexto del Manual de Paleografía de María Mercedes Ladrón de Guevara, Bogotá: 1996.
15
Ibíd., pág. LI.
16
Alfonso García-Gallo. Manual de Historia del Derecho Español. (tomo I) El origen y la evolución del Derecho
Español. 2 vols. 9 edición, Madrid, 1982.
To ga d o s y L e t ra d o s
90
Español, ellos son del orden político, económico y socio jurídico. Una mirada breve,
en el dieciocho señala cómo en lo político España se somete a Aragón (1703-
1713) bajo el reinado de Felipe V (1700-1746) e hizo efectiva la unidad nacional a
costa de ir perdiendo sus dominios en Europa y en América, en el momento donde
empezaron las tendencias separatistas. Pierde hegemonía en política internacional
y libertad de actuación en virtud con sus pactos con Francia. Desde lo económico
hay un resurgimiento de la economía en virtud de una política mercantilista que
la fortalece internamente. Además del predominio de la burguesía ascendente que
toma cada vez más el control del Estado apoyada en las clases populares.
17
Rafael Gibert. “La historia del derecho como historia de los libros jurídicos”, en: I Seminario de historia del
derecho y derecho privado. Edición a cargo de Joaquín Cerdá y Ruiz-Fines, Pablo Salvador Coderch. Universidad
Autónoma de Barcelona, Bellaterra, 1985, págs. 61-92.
18
José Sánchez-Arcilla Bernal. De la historia y del Derecho. Algunas reflexiones sobre una historia (jurídica) del
derecho. En:http://www.bibliojuridica.org/libros/4/1855/28.pdf.
19
Cfr con la obra historiográfica del mismo Sánchez-Arcilla y en especial su obra denominada ID quod ego: los
caminos de la ciencia jurídica. Madrid: ed. Dykinson, 2003 en la que presenta un estudio sobre los orígenes y
la conecpción metodólogica de que denominó escuela histórica “institucional”. La importancia de esta obra
de Sánchez-Arcilla ha sido cuestionada por otros historiadores del derecho como Manuel J. Peláez, en una
reseña crítica que hizo al Jacobus en la Revista de estudios histórico-jurídicos. Valaparaiso, no. 26, 2004, págs.
711-716, quien en uno de sus apartes ataca fuertemente la tesis del libro de Sánchez-Arcilla y de paso deja en
entredicho la importancia y vigencia de la obra de Alfonso García-Gallo para la cultura iushistorica europea:
“El problema de García-Gallo es que fue un hombre que se formó en España, y esa inquietud transmitió a
sus discípulos, que preferían adquirir su ilustración al lado del maestro en Madrid, cuando antes de él algunos
historiadores del derecho se habían formado en Bolonia, Friburgo de Brisgovia y Berlin. Desaparecido del
panorama historiográfico jurídico español García-Gallo, o ya menos influyente desde los años setenta, los
lugares en Europa más frecuentes de turismo científico de los historiadores del derecho español han sido las
ciudades de Bolobia, Roma, Francfort del Meno, Messina, Toulouse y Paris”.
To ga d o s y L e t ra d o s
92
(…) entre las Universidades más famosas se cuentan las de Palencia (1212),
Salamanca (1215, con privilegio pontificio en 1235), Valladolid (h.1260
reconocida en 1346), Lérida (1300), Perpiñan (1350), Huesca (1354), Sigüenza
(1476), Alcalá (1495), Valencia (1500), Santiago (1506), Sevilla (1561),
Granada (1540), Zaragoza (1583), Oviedo (1608), Mallorca (1697), Cervera
(1717), etc. En la edad Moderna se fundan otras en América: Santo Domingo
(1538), Méjico (1551), Lima (1551), Quito (1586), Cuzco (1598), Chuquisaca
(La Plata, actual Sucre, 1623), Guatemala (1676), Caracas (1721), La Habana
(1735), Chile (1735), Córdoba de Tucumán (1795; F. 219), etc.; en 1645 se
funda la de Manila en Filipinas2.
1
Cfr. con la obra de Clavero, op. cit., los denomina “Studia Generalia” y ellos conferían el título de doctor utriusque
iuris, doctor tanto en derecho canónico como derecho civil: “Así los juristas más destacados podían doctorarse
en ambos derechos –civil y canónico–, y ello les otorgaba por lo regular facultades docentes en “Estudios
Generales” de cualquier territorio de la cristiandad romana; una cultura común, con un lenguaje culto aún
común, y con una autoridad política para la fundación de tales “Estudios” también en principio común (…)”
pág. 23. Valga anotar que Bartolomé Clavero es uno de los representantes de la nueva escuela que se nutre y
toma sus fuentes en autores europeos diferentes a García-Gallo.
2
Alfonso García-Gallo. Manual de Historia del Derecho Español. 2 vols. Madrid, 1982, pág. 313.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
95
Las clases se impartían sin preparación previa y desde la exégesis, para los dos
derechos. De hecho, el derecho canónico se enseñaba desde la exégesis del Decreto y
las Decretales, con dos cursos para cada una de las obras, alternando con dos cursos
del Sexto y las Clementinas, para un promedio de cuatro a ocho cursos. En otros
casos como la Universidad de Padua el primer estudio se dedica a las Instituciones
de Justiniano y otros al Digesto y al Código. Pero, en general, cada universidad tenía
su propio Plan y la extensión de los estudios oscilaba entre cuatro y seis cursos.
3
Ibíd., págs. 313-314.
4
Clavero. Op. cit.
To ga d o s y L e t ra d o s
96
dándole “un libro como símbolo de la facultad que adquiere para leer, el anillo y
el birrete de doctor; y se le sienta en una cátedra entre los doctores”5.
Por otra parte, en el periodo del siglo XVIII al XX, que nos interesa, García-
Gallo refiere que el dieciocho inicia con una reforma en los planes de estudio,
que luchan contra el método tradicional de enseñanza. Se produce una reacción
contra la enseñanza exclusiva del Derecho Romano y canónico a favor del
Derecho Nacional. En 1713 en Castilla se da un avance al respecto, porque
el Consejo de Castilla ordena que todas las universidades españolas enseñen
Derecho Nacional o patrio, cuyas normas eran las de aplicación en la práctica,
en lugar de las del romano. La medida encontró resistencia en aquellos centros
apegados a la tradición y en 1741 el mismo consejo insiste en la directirz
solicitando que alternen el derecho romano con alusión en sus explicaciones
al derecho patrio. En contra de esta tendencia, algunas universidades insisten
en enseñar derecho Romano como la de Cervera en Cataluña. En 1771 se
reforma el Plan de estudios y se crean en España cátedras de derecho patrio en las
universidades y hacia 1780 bajo el racionalismo borbónico se crea una cátedra
de derecho natural y de gentes para ser cursada por bachilleres en leyes que quieran
ejercer como abogados en el Estudio de San Isidro de Madrid6.
5
Ibíd., pág. 316.
6
Ibíd.
To ga d o s y L e t ra d o s
98
(…) muy ordinariamente de las aulas no se saca luz, sino tinieblas que después,
nunca disipa la luz de los libros. Explícame: llega un pobre cursante a oír en la
Universidad a un catedrático muy encaprichado de máximas vulgarizadas (…)
por más libros que tenga o lea después este hombre, si Dios no lo dotó de un
entendimiento muy despejado, no le sacarán de la carretilla en que le puso el
catedrático. Su maestro fue un mosquete y él será siempre un fusil con bayoneta
calada. (…) el corto alcance de algunos de nuestros profesores. Hay una especie
de ignorantes perdurables, precisados a saber siempre poco, no por otra razón,
sino porque piensan que no hay más que saber que aquello poco que saben7.
Pero la mayor de todas (las dificultades) está de parte de los profesores antiguos,
o viejos, a lo menos de muchos de ellos, los cuales, mirando como desprecio de su
existimada ciencia, que en las escuelas que empiece a enseñar lo que ellos ignoran,
es natural se valgan de la autoridad que les dan sus años, y sus honores para
hacer odiosa esta novedad (literaria). Los dos primeros estorbos los considero
bastante vencibles. Pero el último es formidable, y sólo veo, que paulatinamente
se puede ir removiendo este estorbo, ofreciendo el tiempo algunos nuevos
profesores de más que ordinaria capacidad, y de espíritu generoso, que rompan
la valla introduciendo el buen gusto literario en las escuelas8.
7
Juan Ros García. “La transmisión científica en el siglo XVIII. El padre Feijóo. Conferencia inaugural del curso
de posgrado. Escuela de documentación”, en: Documentación de las Ciencias de la Información. No.14 - 1991,
45-68. Universidad Complutense de Madrid, pág. 50.
8
Ibíd., pág. 51.
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99
del siglo XVIII por el rey Carlos III en su política de impulso a la ilustración
bajo la tutela oficial, que será conocida como el Despotismo Ilustrado.
Hasta aquel tiempo la escasez de libros y escuelas tenia contenidos á los ingenios
en el limitado circulo de las ciencias eclesiásticas; y aun a estas reducidas por la
mayor parte á pequeñas sumas y colecciones de textos y cánones, muchas veces
mal copiados, y alterando su sentido; y la legislación civil solo consistía en usos
y costumbres tradicionales, o algunos cortos fueros locales, que no obligaba más
que en determinados pueblos y territorios. El derecho romano, presentado de
un golpe en sus códigos un manantial inagotable de erudición y doctrina legal
y política, llamó bien presto la atención de los literatos, y ocupó á los mayores
ingenios en formar sumas, breviarios, compendios, aparatos, glosas, tratados,
cuestiones, concordancias, y otras tales obras para su mayor ilustración, aunque
por desgracia, la rudeza y la falta de crítica de aquellos tiempos no permitió
sacar todo el fruto que pudieran producir en otros más ilustrados9.
9
Sempere y Guarinos. Op. cit., pág. 227. La transcripción es literal del original, con la ortografía del documento.
To ga d o s y L e t ra d o s
100
Las exigencias académicas para el estudio del derecho eran mínimas por no
decirlas laxas y permisivas. En una sociedad tan jerarquizada como la de Francia
en los siglos XVI a XVIII, a los agraciados genesiócratas les bastaba con unas
cuantas lecciones, dejado el resto para ser aprendido en la vida real, con apoyo de
los influjos oportunos llovidos a torrentes. ¿De qué iban a servir, se pensaba, el
Código y la Instituta de Justiniano, muchas de cuyas leyes ya estaban derogadas?
Más útil le era al joven, tras corta estancia en el Collége, la segunda educación
prodigada por la vida y la experiencia10.
Por otra parte, Borrero señala cómo en el siglo XVIII las facultades de
derecho y algunas de teología, instauraron cátedras sobre teoría del Estado y la
ciencia del gobierno, siendo pioneras las de Alemania:
Alfonso Borrero Cabal S.J. La universidad Estudios sobre sus orígenes, dinámicas y tendencias. Bogotá: Universidad
10
Javeriana, tomo I, Historia Universitaria: La universidad en Europa desde sus orígenes hasta la Revolución
Francesa, pág. 529.
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101
a Dios, la piedad filial, el afecto de los padres hacia sus hijos, el amor a la patria,
el respeto a los juramentos, el deseo del bien y el horror por el mal, el principio
de no hacer a los otros aquello que no se aceptaría fuera hecho con nosotros”11.
11
Ibíd., pág. 531.
To ga d o s y L e t ra d o s
102
ideado plan, podrian alcanzar y sobrar para todo, serviria para ocupar a muchos,
arraigan el amor racional, e introducir la emulacion y aplicación al trabajo de
agricultura Artes y Ciencias; y tambien para fomentar el Reyno, donde se
refundia lo mismo o mayor parte de lo que se pagaba, o contribuía (…)12.
Descripción del Reyno de Santa Fe de Bogotá (…). Op. cit., pág. 225. La ortografía del texto original.
12
La lengua nativa debe ser el primer estudio, y el primer adorno de cada una. No
hay cosa que dé una idea tan ventajosa de la política y buena educación de una
nación como quando los individuos de ella en lo general se explican y escriben
en propiedad y nobleza: ¿hay cosa mas extraña (por no decir ridícula) que
ignorar un hombre el idioma propio, y sin cuidar de aprenderle, hacer grande
ostentación de estudiar el griego, el hebreo, el caldeo, el inglés, etc? Lenguas
muertas las primeras que en toda su fuerza, pronunciación y propiedad, nadie
sabe ni puede saber hoy.
Todo esto es cosa admirable para despues; antes no es mas que ignorar lo
necesario y estudiar lo inútil, estar sin camisa y comprar vueltas.
Con la lengua mejor de todas las vivas, somos al presente los que escribimos peor
que todos, sin propiedad, sin pureza, sin claridad, sin limpieza, sin naturalidad,
sin belleza, sin unión, sin excitar, sin mover, y con oracionado asiático, duro,
obscuro, bronco y encadenado que fatiga á todo lector. Este es nuestro uso14.
14
Almacén de Frutos literarios inéditos de nuestros mejores autores antiguos y modernos. Tomo I. Cádiz: Imprenta de
Lema, año de 1813. Edición facsimilar digitalizada en la Biblioteca Nacional de España. No registra autor en la
portada pero en la presentación se hace referencia al autor como el Abate Gándara y las anotaciones de Antonio
Valladeres de Sotomayor, págs. 293-294.
15
Ibíd., pág. 240.
To ga d o s y L e t ra d o s
104
gastos de los grados que impedían que los jóvenes de bajos recursos tuvieran
acceso a la educación:
Nuestras leyes del reyno, pragmáticas y autos acordados están en su mayor parte
hechos en ocurrencia de casos particulares: y no fueron mas que decisiones de
aquellos artículos causales que en el día se agitaban, y que por lo comun solo se
examinaban civilmente con respecto á las razones del artículo en cuestion.
Pero sin relacion general, combinación política ni de estado que abraze y se
encaminase á un punto fixo y unido de legislación fundamental, conciliando
todas sus partes la universalidad de la jurisprudencia civil, política, gubernativa
y de derecho público nacional, con el espíritu del interes general del Estado.
Y si no, pregunto: ¿las pragmáticas suntuarias (por ejemplo), y mil otras leyes que
disminuyen el adelantamiento, y la utilidad de los frutos de nuestras cosechas,
habrian formádose?
Los decretos ordinarios, edictos, órdenes, vandos, cédulas y providencias del
gobierno superior han padecido en general el mismo inconveniente, y es ya
indispensable reducir para lo venidero todos estos objetos á un solo punto de
vista; porque á la verdad no hay ya otro modo de hacer poderoso al rey, rico al
erario, y opulentos á los vasallos, ni de restablecer el crédito, lustre y abundancia
genera que constituye á la felicidad pública de una nacion (pág. 218).
Reconozco no obstante que el templar y acordar en una todas las teclas del clave
monárquico de este código es la operación política mas difícil y mas delicada
de quanto hay que hacer en España, pero tambien es la piedra angular de toda
la prosperidad, y á un interes semejante deben dedicarse todas las fuerzas del
entendimiento, sin perdonar trabajo, estudio, meditacion, fatigas no desvelos.
17
Ibíd., págs. 218-221.
To ga d o s y L e t ra d o s
106
en ejercicio del litigio y la magistratura, por supuesto, que los pocos en ejercicio
ajustaban sus acciones al regalismo. Esa parece un actitud, anterior al dieciocho,
de hecho el historiador Sempere y Guarinos afirma que los jurisconsultos en
el siglo X correspondían en sus escritos con el poder imperial, en las obras de
Hieneccius y Gravina hay ejemplos, algunas doctrinas del Digesto como aquella
de que “lo que agrada al príncipe tiene rigor de ley” fueron implementadas, por
ejemplos en los Usages de Barcelona (1068). A respecto de lo cual dice Sempere
que era Barcelona hacia el siglo XI la ciudad más rica y comercial de toda España
y que los conocimientos en materia de derecho de aquel principado hicieron
insuficiente la aplicación del Fuero Juzgo, y que allí es donde el derecho romano
adquiere más fuerza, aunque este derecho fuera contrario al espíritu libertario
que tiempo más tarde tendría la constitución catalana. También muestra como
favoreció a Cataluña, que para el siglo XIII era una de las provincias más cultas y
civilizadas de la época, con un derecho marítimo del que luego tomarían referencia
todos pueblos marinos, en especial los italianos (Venecia, Génova y Pisa).
Luego que se abrieron las escuelas del derecho romano en Bolonia y otras
universidades de Italia, á mitad del siglo XII, concurrieron á ellas muchísimos
españoles. Hasta el año de 1300 en que se fundó la Universidad de Lérida,
todos los letrados aragoneses se formaron en aquellas escuelas (4) Fueron muy
famosos en ellas Mateo Español, por los años de 1204 (5) Pedro, doctor en
decretos, por los años de 1225 (6). García, el primer catedrático que gozó sueldo
fijo en la de Bolonia (7) Ansaldo, ó Gonzalo, el primer rector de la de Padua (8).
Allí florecieron tambien Bernardo compostelano, autor de una colección de
cánones, y de otras muchas obras de jurisprudencia canónica y civil. Allí Juan
de Dios, San Ramon de Peñafort principal autor de la colección de Decretales;
y allí otros muchos jurisconsultos españoles como puede verse en las bibliotecas
de D. Nicolas Antonio y D. José Rodríguez de Castro18.
“De los maestros. Mando, é tengo por bien que haya un maestro en leyes, é yo
que le dé quinientos maravedíes de salario, por el año: é que haya un bachiller
legista.
“Otrosí, mando que haya un maestro en decretos, é yo le dé trescientos maravedís
cada año.
“Otrosí, mando que haya dos maestros en decretales, é yo le dé tres cientos
maravedis cada año.
“Otrosí, tengo por bien que haya dos maestros en fisica, é yo que les dé doscientos
maravedís cada año.
“Otrosí, que haya dos maestros en gramática, é yo les dé doscientos maravedís
cada año.
“Otrosí, mando, é tengo por bien que hay un estacionario, é yo que le dé cien
maravedís cada año: é él tenga todos los ejemplares buenos, é correctos.
“Otrosí, mando é tengo por bien que hay un maestro de órgano, é yo le dé cien
maravedís cada año.
“Otrosí, mando que haya un capellan, é yo le dé cincuenta maravedís cada año.
“Otrosí, tengo por bien que el dean de Salamanca, é Arnal de Sanz, que yo
fago conservadores del estudio, que hayan cada año doscientos maravedís por
su trabajo; é pongo otros doscientos que tenga Arnal; é el dean sobredicho para
hacer dispensas en las cosas que fueren menester al estudio19.
19
Ibíd.
To ga d o s y L e t ra d o s
108
Valga anotar que el tema de los controles a los abogados y las disposiciones a
favor de la regulación de sus estudios y titulación, no son fenómenos que puedan
asociarse con el siglo XVIII, de hecho desde la conquista y con los primeros
adelantados hacia las indias, ya se advertía sobre los controles para su llegada y
las razones de los encargos reales para su arribo al nuevo mundo22.
Son varias las disposiciones sobre la profesión de los juristas, expedidas por
la Corona, para regular tanto el número como los excesos en que podían incurrir
20
Ibíd., pág. 276.
21
Ver Extracto puntual de las pragmáticas, Cédulas, provisiones, Circulares, y autos acordados, publicados y expedidos en
el reynado de D. Carlos III. Santos Sánchez, Madrid: 1973.
22
Sobre los problemas en que los juristas incurrían en ejercicio de su cargo y en desarrollo de su labor como
adelantados, ver el litigio seguido al abogado fundador Gonzalo Jiménez de Quesada, en Boletín de Historia
y Antigüedades: “Pleito seguido por el licenciado Gallego y sus herederos contra el Licenciado Jiménez de Quesada”
(1539) XXIII, 1936, págs. 259-60.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
109
en su afán por hallar nuevas causas. Algunos trabajos sobre la formación del
derecho colombiano cuentan con datos biográficos sobre los primeros abogados
en ejercicio en el Nuevo Reino de Granada, insisten en el perfil del “picapleitos”
para los juristas ambiciosos en la búsqueda de litigios, que generaba desconfianza
entre la comunidad y las autoridades locales. En ese sentido, se cita el trabajo
preliminar de Antolinez Wilches, quien establece en su estudio, además del
creciente número de letrados en la conquista, su falta de integridad:
Para que en los tribunales de la América è Islas Philipinas, no se admitan mas (sic)
recusaciones que las que citan, y jamás se puedan recusar sino solos tres Abogados por
cada Parte Litigante, en el cáso que se expresa (folio 115r).
EL REY
23
Jesús Antolinez Wilches. “Primeros abogados españoles que vinieron al Nuevo Reino de Granada”, en: Boletín
de Historia y antigüedades, Vol. XXI, 1934, págs. 217-222. Anuncia un trabajo sobre Historia del Derecho
Colombiano. Ver la obra de Ángel Osorio Gallardo, El alma de la Toga, denunciado el estado de sobrepoblación
de juristas en España. Cita Antolinez a Ricardo Levene en trascripción de la cédula de 1509: “Porque yo he
seydo informado que a capsa de aver pasado a las dichas Indias algunos letrados abogados han subcedido en ellas muchos
pleitos e diferencias yo vos mando que de aquí adelante no dexeys ni consyntays pasar a las dichas Indias ningund letrado
abogado syn nuestra licencia e especial mandado que sy necesario es por esta preseute cédula lo vedamos e proyvimos”
(pág. 136). El mismo fragmento de la orden Real a los oficiales de la Casa de Contratación de Sevilla, es
transcrito por Rafael Domínguez, en: Galería Universitaria. Caracas: Parra León Hermanos editores, pág. 45.
To ga d o s y L e t ra d o s
110
Para que en todos los Tribunales de las Indias se observen las Leyes y Auto Acordado
que se citan, en punto de que sea suficiente la acusacion de una rebeldía, quitando el
abúso de que sea de tres (folio 119r).
Cédulas Reales, pragmáticas, etc. Autor corporativo. Fondo Antiguo. Biblioteca Nacional de Colombia.
24
Tulio Chiossone. Formación Jurídica de Venezuela en la Colonia y la República. Caracas: Universidad Central de
25
EL REY
En la segunda parte del siglo XVIII el pleito de los jesuitas en los tribunales
españoles merece especial atención del monarca, quien en cédula de 7 de
octubre de 1767 establece las autoridades y criterios que deben seguirse en el
extrañamiento y las temporalidades de todos los procesados:
26
Cédulas Reales, pragmáticas, etc. Autor corporativo. Fondo Antiguo. Biblioteca Nacional de Colombia.
Transcripción completa del texto.
To ga d o s y L e t ra d o s
112
Real Cédula de su majestad, a consulta del Consejo extraordinario. Madrid, octubre 7 de 1767. Editado por la
27
Fueron muy severos los requisitos exigidos para optar al título, una vez
realizados los estudios universitarios. La Real Audiencia los otorgaba previas
formalidades como la comprobación del lugar de nacimiento, la limpieza de
sangre, certificaciones de Vita et moribus, el juramento y la inscripción en el
Colegio de Abogados29.
28
Ibíd, Chiossene, págs. 113-114. Aunque cita la experiencia de la Real Audiencia de Caracas, se puede citar de
manera análoga para el Virreinato de la Nueva Granada.
29
Ibíd, Chiossione. Cita a Héctor García Chuecos. Estudios de Historia colonial venezolana, tomo II, Caracas:
Tipografía americana, 1938, pág. 114. Cfr. con el estudio de Víctor Manuel Uribe, “Disputas entre el estado y
sociedad sobre la educación de los abogados” (…) y cita de José Antonio Ricaute “Compendio de lo Actuado
sobre Estudios Públicos”. Boletín de Historia y Antigüedades XXIV, 1973, págs. 343-371.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
115
El aspirante debía demostrar que había cumplido con una pasantía, que implicaba
la práctica en un tribunal, como escribiente, durante cuatro años. También podía
realizarla en el bufete de algún abogado famoso, siempre con la obligación de asistir
30
Hectór Parra Márquez. Historia del Colegio de abogados de Caracas. Tomo II, Caracas: 1973, pág. 16.
To ga d o s y L e t ra d o s
116
a la vista de los pleitos. La pasantía encontraba su razón en la idea de que con la sola
formación académica no era suficiente para adquirir la actitud técnica requerida
en las tareas del foro. Los colegios de abogados en España y en el nuevo mundo
crearon “cursos prácticos de jurisprudencia” para tal fin.
Por otra parte, el manejo de los procesos y las audiencias, a falta de una
verdadera legislación con carácter procesal puede observarse en varias Cédulas
que disponían aspectos específicos en el manejo de los pleitos. A manera de
ilustración trascribimos algunas normas que establecen la forma de actuar ante
las Reales Audiencias:
31
Cédulas reales referidas abogados en versión digital de edición original citada de: www.bibliojuridica.org/
libros/1/407/16pdf. Se encuentran citadas conforme de transcriben, se presume el texto completo, y en algunas
materias parecen pertenecer a un cedulario del virreinato de Nueva España.
32
Ibíd.
33
Ibíd.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
117
Que el Asesor General debe despachar los Pedimentos fiscales con preferencia
á todo, y que el giro y curso de los negocios fiscales se haga con la puntualidad
y expedición que se debe é importa al Real servicio.
34
Ibíd.
35
Ibíd.
36
Ibíd.
37
Ibíd.
To ga d o s y L e t ra d o s
118
Catálogo de abogados38
Catálogo de Médicos y Abogados. Archivo General de la Nación. República de Colombia. Serie Catálogos e
38
39
Rollo 1, págs. 9-13.
To ga d o s y L e t ra d o s
120
41
Ibíd., Rollo 3, págs. 18-22.
To ga d o s y L e t ra d o s
122
Fuente: Archivo General de la Nación. Fondo Colonia: Médicos y abogados. Elaborado por la autora.
Las solicitudes son parte del acervo documental que está disponible en
el Archivo General de la Nación, y se cita para destacar el movimiento de la
práctica y desempeño profesional de los juristas ante la Real Audiencia de
Santafé y ante el Colegio de Abogados, además, del alto formalismo requerido
para la expedición de certificados de estudios y profesionales. Deja abierta la
puerta a trabajos de investigación que profundicen sobre el campus y habitus, de
los abogados (en el sentido de Bourdieu) durante la colonia neogranadina.
43
Ibíd., Rollo 5, págs. 32-35
44
Ibíd., Rollo 6, págs. 36-38
To ga d o s y L e t ra d o s
126
Las referencias históricas nos revelan que hubo un profuso movimiento en las
prácticas judiciales de los estrados de la metrópoli. El dinamismo de las Reales
Audiencias y las frecuentes alusiones a la superpoblación de abogados, de pleitos
y de oportunistas que se confundían con los doctores de la ley en las grandes
provincias, contrasta con los textos donde se intentaba organizar el quehacer de
1
Cfr. Con la obra Historia de las Universidades hispanoamericanas. Periodo Hispánico. Águeda María Rodríguez
Cruz O. P., 2 tomos, Bogotá, 1973.
To ga d o s y L e t ra d o s
128
2
Cfr. los trabajos sobre historia de la abogacía en España y en la metrópoli, como: Alfonso Aguado Ruiz.
Abogacía y abogados un estudio histórico jurídico. Editorial Universidad de la Rioja, 1997, pág. 288.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
129
Ya a fines del siglo XVII contaba la ciudad con estudios universitarios, los cuales
estuvieron primeramente en el convento de Santo Domingo, pero luego se
crearon los de Santo Tomás, y por último el Arzobispo Fray Cristóbal de Torres
fundó el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, en el cual eran admitidos
como nobles los hijos de los caciques e indios principales; podía estudiarse en
él gramática, filosofía, teología, cánones, jurisprudencia y medicina. La cultura,
si en conjunto no era superior a la de México, la igualaba en muchas de sus
manifestaciones y sobresalía en algunas de éstas4.
El rol de las universidades neogranadinas hasta el siglo XIX era más de juntas
examinadoras para conferir títulos a los estudiantes egresados de los Colegios
Mayores, que de centros de formación académica, siendo los dos más importantes
el Colegio Mayor del Rosario y el Colegio Mayor de San Bartolomé. El primero
fundado inicialmente por dominicos y el segundo por jesuitas. Además, de la
Universidad de Santo Tomás, por fuera de la capital el virreinato, se destacan el
Seminario de San Carlos de Cartagena y el seminario de Popayán, de donde se
eliminaron los cursos de formación en derecho:
3
Francisco Quevedo, O.F.M. Manuscritos teológico-filosóficos coloniales santafereños. Bogotá: Pontificia Universitas
Xaveriana, 1952, págs. 7-8.
4
Ignacio Gutiérrez Ponce. “Las crónicas de mi hogar o apuntes para la historia de Santafé de Bogotá. cap. XXIV
convento de Capuchinos. Terremotos de 1783, la jura de Carlos IV, Fiestas Reales”, en: Papel Periódico Ilustrado.
Tomo III, Bogotá: Imprenta de Silvestre y Compañía, 1883-1884, págs. 3-4.
To ga d o s y L e t ra d o s
130
5
Julio Gaitán Bohórquez. Huestes de estado. La formación universitaria de los juristas en los comienzos del Estado
colombiano. Bogotá: Universidad del Rosario, 2002, pág. 160.
6
Jorge Tomás Uribe Ángel. Historia de la Enseñanza en el Colegio Mayor del Rosario 1653-1767. Bogotá: Ed.
Universidad del Rosario, pág. 29.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
131
(…) esta forma de enseñanza “de viva voz” que se remontaba a la Edad
Media, se presentaba como necesaria ante la ausencia de textos y favorecía la
elocuencia, esto es, la Teatralidad; además se apoyaba en la memoria, con base
en repetición. Ahora bien, la lectio no se limitaba a los libros de texto, sino
a los comentarios. Es decir, sobre las formas previamente institucionalizadas
ni siquiera el alumno podía expresar su opinión, sino que los comentarios se
hallaban institucionalizados7.
Como un paralelo para revisar la formación de los abogados neogranadinos,
está la descripción de la formación jurídica en Venezuela. Tulio Chiossone afirma
que la mayoría de las actividades judiciales de la colonia, se recogen en las Reales
Audiencias, que impulsaban el desarrollo de la profesión y de la magistratura.
Antes de la Creación de Real Audiencia de Caracas (julio 19 de 1787) había
en la ciudad Bachilleres en leyes, abogados y doctores en Derecho, en buen
número, que ejercían la profesión en “estudios” o bufetes y hacían pasantías en
la Audiencia, los egresados de la Universidad Real y Pontificia de Caracas y del
Seminario de San Buenaventura de Mérida. A pesar de no estar desarrollado un
derecho procesal, hubo una primera instancia en los juicios, sustentados en las
normas de las leyes de Indias:
Las leyes que se aplicaron en los procesos criminales fueron las Siete Partidas
y la Nueva y Novísima Recopilación, pues las Leyes de Indias, aunque sí
establecían penas, no crearon tipos delictivos especiales. La Real Audiencia
como tribunal de Apelación, no tenía la específica función de moderar la pena,
pero sí lo hacían en algunos casos (…)8.
7
Ibíd., pág. 74. Expresa como a la lectio, la dictatio y la disputatio, se le sumaban las formas medievales de
formación básica que dedían implementar las universidades, la Trivium, comprendida por la gramática, retórica
y dialéctica, y la Cuadrivium: aritmética, geometría, música y astronomía.
8
Tulio Chiossone. Formación Jurídica de Venezuela en la Colonia y la República. Caracas: U. Central de Venezuela,
1980, pág. 114. cita a Héctor García Chuecos en Estudios de la Historia Colonial venezolana, tomo II, Caracas:
Tipografía de América, 1938.
To ga d o s y L e t ra d o s
132
Parece exacto el juicio de que poco podría exigirse en aquel Foro cuando la
instrucción de sus profesores estaba reducida al desordenado y superficial
estudio de la legislación romano-canónica, sin conocer la historia de las leyes
españolas, sin estudios accesorios de literatura y sin conocimiento exacto del
derecho patrio10.
9
Ibíd. Chiossone.
10
Arturo Majada. Oratoria Forense. Indicaciones históricas. Barcelona: Ed. Bosch, 1962, pág. 42.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
133
Los rastros sobre elocuencia forense son pocos y los escritos sobre defensas,
y alegatos fiscales, en los archivos, sobre todo en el Consejo de Castilla
muestran abogados con estilo confuso, poca claridad en la construcción de las
frases, sin formación literaria, con abuso de citas y exceso de erudición indigesta
e inoportuna. Según Majada, en el reinado de Felipe III y Carlos II, no se
mencionan abogados brillantes por sus defensas orales o escritas, solo hasta la
reacción de los tratadistas en el reinado de Fernando VI y Carlos III se produce
un giro en la jurisprudencia española:
Con la favorable influencia que ejerció en nuestro idioma la escuela clásica que
floreció desde mediados del siglo, con la reacción operada en la república de
las letras, mejoró en alto grado el estilo forense, se introdujo entre abogados
y fiscales el buen gusto literario que es elemento tan esencial en el arte de la
palabra y brillaron oradores como el Conde de Campomanes, Meléndez Valdés,
Jovellanos, Pérez Camino y Rojas Cortés12.
11
Ibíd.
12
Majada, ibíd, pág. 45.
To ga d o s y L e t ra d o s
134
bajo los parámetros de España y en la lógica del sistema medieval clásico de las
siete artes liberales del trivium (gramática, oratoria, dialéctica) y el cuadrivium
(astronomía, aritmética, geometría y música) y la Ratio Studiorum. Después de
la Escuela de Primeras letras, la enseñanza comprendía tres partes: Gramática
y Retórica, Artes o Filosofía y luego las facultades mayores: Teología, Cánones
(derecho eclesiástico), Leyes (jurisprudencia civil) y Medicina. Los grados que
se podían recibir en las universidades eran los de: Bachiller, Licenciado, Doctor
y Maestro, el primero se alcanzaba en la adolescencia y el de doctor antes de
los veinte años, de allí, dependiendo de los estudios se podía hacer carrera en el
magisterio o de cátedra (como lectores). En general, el latín estaba en todo el
proceso de formación, y, después de leer y escribir, era la tarea más importante
que tenía que asumir el estudiante para avanzar:
En las universidades europeas y en las de las indias las clases de las facultades
mayores se exponían en latín de forma obligatoria. Los lectores o catedráticos
dictaban sus clases en esa lengua a excepción de los de artes, que podían usar
la lengua Romance para poner ejemplos y en el derecho, especialmente, para
citar leyes españolas. Según Rivas tal obligatoriedad estaba de acuerdo con los
estatutos de la Universidad de Salamanca de 1538 “item estatuímos y ordenamos
que los lectores sean obligados a leer en latín (…) excepto refiriendo alguna ley
del reyno o poniendo exemplo”14.
13
José Manuel Rivas Sacconi. El latín en Colombia. Bosquejo histórico del humanismo colombiano. Bogotá: Instituto
Caro y Cuervo, 1993, pág. 56.
14
Ibíd., pág. 64. González de la Calle. Latín “universitario”.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
135
materias y la mayoría de los textos estaban en latín, lo que en caso del derecho
puede verificarse cuando se revisan los títulos existentes en las bibliotecas que
transcribimos, en su gran mayoría de autores y en lengua latina. Dentro y fuera
de los colegios había una intensa vida intelectual y muchas oportunidades para
mostrar los conocimientos y la formación en latín, verbigracia, los certámenes,
la inauguración y finalización de cursos, grados y oposición de cátedras, entre
otros. La emulación de conocimientos era una fuente de trabajo intelectual y las
rivalidades entre los colegios, como la que existía entre San Bartolomé y la del
Rosario, les daba mayor brillo.
Por otra parte, en su capítulo sobre los “Tratados didácticos” Rivas anota
como los textos latinos que se empleaban en los siglos XVII y XVIII, son la
mejor comprobación del uso de esa lengua. El dictado era la forma como se
conformaban los Mamotretos, unas veces hechos por los profesores y otras por
los mismos estudiantes, y como resultado de la lectura In voce. El catedrático
organizaba sus mamotretos que en la gran mayoría de los casos eran obras
mediocres y elementales, razón por la que muchos reclamaban que la enseñanza
se hiciera con los libros impresos. En la Biblioteca Nacional se encuentra buena
parte de los libros provenientes de los colegios de las órdenes religiosas que
junto a los del Colegio del Rosario son la muestra del latín universitario de la
Nueva Granada. En gran número se encuentran los de filosofía y teología, y
muy escasos de derecho y humanidades, los primeros libros son producidos en el
Colegio Mayor del Rosario, y de San Bartolomé con maestros como el javeriano
Martínez de Ripalda, y en el caso de materias jurídicas textos como el tratado
De iurisdictiones de Juan Antonio de Oviedo y Rivas en 1645, oidor de la Real
Audiencia de Santa Fe16.
15
Ibíd., pág. 71.
16
Ibíd., pág. 120. Ad perdifficile elegansque Papiniani responsum in L. I. de officio eius cui mandata est iurisdictio
laconica et utilia scolia, aut…ad tractatum de iurisdictione, anno 1644, s.
To ga d o s y L e t ra d o s
136
17
Ibíd. pág. 188. Expugnatio apellationis, vel appellantis a decreto et executione decreti Eminentissimi Cardinalis
Patriarchae Antiocheni, Commissarii et Visitatioris Apostolici, cum potestate Legati a latere in Regno Chinarum, D.
Caroli de Tournon, emanate die 25 lanuarii 1707. El nombre completo en latín, de las obras se cita raramente en
los inventarios, ese será un elemento que dificulte su identificación plena, en virtud a que varias obras podían
citarse en su forma abreviada, de manera similar.
18
Ibíd., pág. 206.
19
Ibíd., pág. 207 el título completo es: Vota decisiva, uidicialiter prolata in Regio Santae Fidei in Novo Granatensi
Orbe Supremo Senatu. Opus licet non specialiter novum nec tritum in Chancellariis Indiarum. Necessarium quidem ac
omnibus in foro versantibus apprime utile.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
137
Será hasta los siglos XII y XIII que se descubran los antecedentes de los
Colegios en los Privilegios reales de 1295 y 1333, documentos conservados en
el Archivo de Aragón, que consolidan el Colegio de Abogados de Barcelona.
El autor muestra cómo el siglo XIII es el del derecho Romano retomado por
los juristas, del Ius Novum, del esplendor de la Escuela de Bolonia, de Santo
Tomás y las órdenes mendicantes, el final de las Cruzadas, San Francisco de
Asís, Aristóteles de la mano del Islam y de las Partidas. Además, señala cómo
el influjo de los principios canonistas de las Partidas, de corte románico será el
antecedente de otros colegios como el de Zaragoza mediante el ordenamiento
20
Historia de los Colegios de Abogados de España. Conferencia del Excmo. Sr. D. Manuel Iglesias Corral en
el Ilustre Colegio de Abogados de Málaga con motivo de su bicentenario. Manuel Iglesias Corral Decano
del Ilustre Colegio de Abogados de La Coruña de 1963 a 1988. Día 15 de octubre de 1976. Versión digital
consultada el día Marzo 18 de 2009, http://www.icacor.es/sp/pages/menu.asp?pag=19&url=0&nodo=17. cfr.
Peréz Bustamante, Rogelio. El ilustre Colegio de Abogados de Madrid 1596-1996. En: Barcia Lago, Modesto.
Abogacía y ciudadanía. Madrid: Dykinson, 2007.
21
Ibíd.
To ga d o s y L e t ra d o s
138
jurídico de Sancho IV, y como consta en una escritura de 1546 allí existía la
“Cofradía de Letrados del Señor San Ivo”, antecedente del “Real e Ilustre
Colegio de Abogados de Zaragoza”.
Iglesias Corral cita autores de la época que señalan cómo desde el siglo XI
surgen Colegios (El Colegio de Artistas, la Cofradía o hermandad de Cambiadores,
la Cofradía del Cirial, la Cofradía de los Azabacheros, etc.) y también se discute
como Cofradía y hermandad son conceptos sinónimos (López Ferreiro) y como
en otras ocasiones tenían acepciones diferentes (Tramoyeres). Hubo varias
resistencias históricas al proceso de formación de las Cofradías o hermandades,
entre ellas las de Fernando III, quien luego las mandó a disolver y en otros casos
a limitó sus funciones. Las Partidas controlan a los profesionales del Derecho
y niegan la posibilidad a las agremiaciones. En las Cortes de Sevilla (1250),
Jerez (1269) y Valladolid (1268), hay oposición a las asociaciones profesionales.
Ibíd. Cfr. con las anotaciones de Sánchez Ventura y Pascual en su obra “La Seguridad Social de la Abogacía”.
22
Podemos revisar los contenidos y los términos en que se realizan las solicitudes
ante la Real Audiencia, como en el caso del señor Luis Tadeo Jiménez en el que
podemos observar la ritualidad de la solicitud, el lenguaje forense y los anexos
documentales que se agregan a los expedientes:
23
Miguel Martín Jiménez de Mañana. Doscientos Años del Colegio de Abogados de Cáceres. Archivo-Biblioteca.
Diputación Provincial de Cáceres. Época IV. Número 46. Enero-Abril 1999. Índice. 1999-2008. Revista
Alcántara. hptt/ab.dip-aceres.org/alcantara/alcan013.htm-199k consultada, marzo 18 de 2009.
24
Catálogos e índices. Médicos y Abogados. Archivo General de la Nación. República de Colombia. Bogotá: 1993,
64p. Ver listado anexo en el capítulo 5 sobre solicitudes de los abogados en la Real Audiencia.
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140
Señor rector del Colegio Real Mayor de nuestra señora del Rosario= Don
Luis Javier Jimenez Colegial formal de el presento a los pies de s señoria,
con mi mayor respeto y como mas haya lugar en que hecho digo: que para
efectos de que me convienen, se hace servir su acreditada justificación mandar
que el secretario de ese Colegio, me de testimonio de las informaciones, que
produce para servir la veca, en que el excelentisimo Señor Virrey, se digno
nombrarme que si es Justicia= Assia rendidamente suplico se sirva proveer
como solicito yo Luis Tadeo Jimenez y Barragan=Santafe tres de Agosto,
de mil setecientos(folio 003) que el Secretario de este Colegio, certifique en
manera que haga fee, si consta en el Archivo de su cargo, haver yo usado de
una de las Becas Seminarias de el, y si para ello hice contar mi legitimidad,
limpieza y nobleza de Sangre como tambien, ser oriundo de la Villa de Honda,
de donde son vecinos, mis Padres= Y que asi mismo certifique si consta que yo
fuere expulso de este colegio, o hiviere dado motivo para ello lo qual mediante
assia. Rendidamente suplico se digne proveer como solicito yo Luis Tadeo
Jimenes, y Barragan=Santafe, y Nobiembre dos, de mil setecientos setenta
y ocho=como lo pide ay una rubrica=Doctor Urive Secretario=informac. El
doctor Don Pedro Urive, (?) secretario de este Colegio Real Mayor (folio004)
Jimenez, y Barragan el clerigo de menores ordenes, y sacristán mayor de la
ciudad de Mariquita puesto a los pies de S. senoria con el debido respeto
digo: que para efectos que hacen a mi derecho se hace servir su acreditada
Justificacion mandarseme de copia legalizada de mi fe de Bautismo que
tengo presentada en esta curia, que en ello recibiré merced, y justicia la qual
mediante A s. señoria rendidamente suplico, se digne proveer como solicito
que Juro en debida forma lo necesario va. Luis (decreto) Tadeo Jimenez y
Barragan=Santafe catorce de Nobiembre, de mil setecientos, setenta y ocho=yo
el notario hice saber el derecho de la buelta à Don Luis Tadeo Jimenez, en su
persona doy fee Jimenez= Robayo Notario=en cum ( folio 005) hijo legitimo
de Don Luis Jimenez y Doña Florencia Barragan vino de un dia nacido, fue su
padrino Don Bartholome Frutos, a quien adverti el parentesco, y obligación
y para que conste lo firmo Doctor Don Miguel Josef Verastegui=Esta cierta y
verdadera, y concuerda con la original de donde la saque, y para que conste doy
la presente, y firmo en Honda, a ocho de Agosto, de mil setecientos setenta y
sinco años=Doctor Don Josef Joaquin Tovar=concuerda con su original que
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141
se halla a la foxa, cuarenta, y quatro de los años que se hallan en este archivo
de mi cargo, sobre la capellania que fundo Doña Petronila Osorio, de donde
se saco corrigió, y (folio 006)25.
25
Ibíd.
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142
26
Documento sobre el exceso de Abogados, Francisco Antonio Moreno y Escandón, Santa Fe de Bogotá 26
de Octubre de 1771, miscelánea 57. Bogotá: Biblioteca Luis Ángel Arango, Libros raros y manuscritos.
Transcripción del documento manuscrito, texto completo en anexo.
27
Op. cit. Descripción del Reyno de Santa Fe de Bogota, escrita en 1789 por D. Francisco Silvestre, Secretario que
fue del Virreinato y antiguo Gobernador de la Provincia de Antioquia. Copiada del original que se encuentra
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143
Porque no ha segdo informado que a cabsa de aver pasado a las Indias algunos
letrados abogados han subcedido en ellas muchos pleitos e diferencias yo vos
mando de que aquí adelante no deseéis ni consintays pasar a las Indias ningún
letrado abogado sin vuestra licencia e especial mandado que sy necesario es por
esta presente Cédula lo vendamos e proyvimos28.
en Sevilla, en el Archivo General de Indias, por Ricardo S. Pereira 1887, Cap. XIII Remedios oportunos que
necesita para sanar de sus males políticos. pág. 226.
28
Op. cit. Rafael Domínguez. Galería Universitaria pág. 49, Parra León Hermanos-Editores. En: Chiossone
Tulio. Formación jurídica de Venezuela en la colonia.
To ga d o s y L e t ra d o s
144
causas pendientes; consistiendo tambien en que casi todos los ministros son de
avanzada edad; padecen continuas dolencias i demas funciones peculiares al
ministerio de alcaldes de corte que ejercen, sino tambien al incesante desvelo que
se requiere; de que en muchas causas de justicia acuden al Superior Gobierno,
embarazándoles la atención a otros importantes objetos del mando (…)29.
Estado del Virreinato de Santa Fe, Nuevo Reino de Granada I Relacion de su gobierno i mando del
29
excelentisimo señor Bailio frey don Pedro Mesia de la Cerda (…) por el D.D. Francisco Antonio Moreno i
Escandon, Fiscal protector de Indios en dicha real Audiencia, Juez i conservador de Rentas Reales. Año de
1772. Texto manuscrito en Biblioteca Luis Ángel Arango, Bogotá. Sec. libros raros y manuscritos.
Capítulo 7
Fueron las burguesías urbanas, cada vez más inequívocamente criollas, las que
conquistaron rápidamente un puesto de vanguardia, y fueron ellas las que, a fines
del siglo XVIII, constituyeron la primera elite social arraigada que conocieron
las ciudades latinoamericanas. Sabían sus miembros que no estaban de paso,
que su destino no era recalar en las metrópolis para disfrutar allí la riqueza
alcanzada sino permanecer en sus ciudades e imponer en ellas sus proyectos
económicos, sus formas de vida y mentalidad. Se sentían comprometidos con
su ciudad y su región, y por eso asumieron con firmeza el papel de elite: no
mucho después pensaron en la independencia política, y alcanzaron a través de
revoluciones urbanas que ellos encabezaron1.
1
José Luis Romero. Latinoamérica: las ciudades y las ideas. 5ª ed., Buenos Aires: Siglo XXI Editores, 2001,
pág. 120.
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147
2
Ibíd., págs. 151-152.
3
Ibíd., págs. 120-121.
4
Julio Gaitán Bohórquez. Huestes de Estado. La formación universitaria de los juristas en los comienzos del Estado
Colombiano. Bogotá: Universidad del Rosario, 2002, pág. 159.
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148
Las voces que ilustran el proceso de formación de las elites no son exclusivas
de un periodo, de hecho desde la misma avanzada imperial de España sobre las
tierras de ultramar, la espada y cruz, fueron aliadas a la pluma de los letrados.
Para el colonialista Richard Konetzke el proceso arranca cuando es necesario
nombrar, para la avanzada colonizadora de las indias, hombres letrados y
hombres de espada:
5
Richard Konetzke. América Latina. La época colonial. Bogotá: Siglo XXI Editores, 1972, págs. 136-137.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
149
Durante la era colonial los cargos de oidor o fiscal que eran los más elevados en
la jerarquía, después de los virreyes, recayeron usualmente en nativos de España.
A veces abogados, criollos especialmente brillantes lograban un puesto de oidor
en una plaza distinta a la de su origen; en muy contados casos lograban un
nombramiento en su propia tierra7.
Un asunto que pone de relieve el trato desigual entre los criollos y los
peninsulares es el relativo a la provisión de los cargos. Sin duda, las disputas
entre criollos y españoles por la obtención de favores y la adjudicación de ciertas
plazas, había causado grandes desconsuelos entre las elites de criollos emergentes,
que veían frustradas sus legítimas aspiraciones de poder. No era fácil el acceso a
las plazas públicas, en tanto, los criollos no eran preferidos para dichos puestos,
salvo notables esfuerzos que debían ser refrendados en las famosas Relaciones de
méritos y circunstancias.
6
Víctor Uribe-Urán. “Disputas entre Estado y Sociedad sobre la educación de los abogados a finales de la etapa
colonial en la Nueva Granada”, en: Historia y Sociedad, dic. 1996, No. 3, págs. 36-37. Cita los estudios sobre las
elites ilustradas de Ángel Rama. La ciudad letrada (Hanover) 1984. Cfr. José Luis Romero, sobre el surgimiento
de las “ciudades patricias” en la primera parte del siglo XIX, de las burguesías criollas de la última parte del
XVIII, en Latinoamerica: las Ciudades y las ideas. Op. cit.
7
Jorge Orlando Melo. Indios y mestizos en la Nueva Granada a finales del siglo XVIII. Francisco Antonio Moreno y
Escandón: retrato de un burócrata colonial. Vol. 124, Bogotá: Biblioteca Banco Popular, 1985, pág. 8.
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150
Son muchos los incidentes suscitados por los naturales de las Indias, como
consecuencia de este celo. Existe un testimonio en el caso del virreinato de
Nueva España, cuando en el año de 1771 redactan un documento para poner
en conocimiento del Rey Carlos III su descontento y la necesidad de que el
monarca reconsiderase las cédulas que limitaban tales nombramientos en favor
de los españoles de nacimiento:
¿Qué importa que las leyes de vuestra majestad sean santísimas, y utilísimas
para estas regiones, y sus naturales, si el gobernador o prelado, que ha
de cuidar de su observancia no está instruido de ellas o de el modo de
practicarlas? Éste es señor el verdadero principio de el atraso de las Indias
y de el (sic) increíble número de vasallos, que faltan a vuestra majestad en
estas partes.
No hay que cansarse en otros raciocinios que mientras que para los empleos de
estas provincias, así eclesiásticas como seculares, se excluyen los nacidos, y criados
en ellas, instruidos en cuanto es necesario estarlo para su régimen, amantes de
esta región, y no ocupados de la idea, de separarse de ellas cargados de oro, han
de continuar los males, que se experimentan, y no hay que prometernos los
ventajosos adelantamientos, a que se debiera aspirar por la proporción, que para
ello tienen estos dominios.
Con lo dicho se persuade bastantemente, que los españoles europeos, por sólo
no haber nacido en Indias, dejan de ser idóneos, para obtener empleos en ellas; y
aun es pernicioso en general, que los obtengan; pero todavía hay que considerar,
que aunque los contemplemos útiles, y más dignos que los indianos, únicamente
a estos, con exclusión de aquellos, debían conferirse los puestos honoríficos de
su patria, consideradas las razones legales, que lo persuaden.
No para toda provisión se solicita la mayor dignidad en el provisto, pues sólo
para los beneficios eclesiásticos se reserva esta averiguación escrupulosa, entre
lo bueno, y lo mejor; y aun en punto de beneficios, siendo de patronato de legos,
tienen estos más libertad, y mayores indulgencias; pero no es necesario recurrir
a estos principios; supongamos por ahora que toda provisión debe hacerse en el
más digno, y que lo son los europeos respecto de los americanos; todavía éstos
deben excluir a aquellos de los honores de Indias.
La calidad de más digno en los casos, en que se requiere no ha de ir a buscarse
fuera de el país, en que está situado el beneficio de que se trata.
Luego para una plaza de Indias, aun cuando deba darse al más digno, se ha de
buscar éste dentro del reino mismo, y no se ha de solicitar en el otro, aunque
ambos sean de los dominios8.
Por su parte, José María Ots Capadequí expresa que la alta aristocracia
colonial se “entroncó” con la nobleza de la metropolitana, en la medida en
que las instituciones españolas se trasladan hacia América, con la creación
de las Audiencias y los Virreinatos, muchos peninsulares encontraron como
una actividad lucrativa servir al Estado en los nuevos territorios coloniales.
Ello coadyuvó lo que el autor denomina “una compleja burocracia peninsular
transplantada a las Indias”, que aunque no pueda considerarse como una nueva
clase social, sí fue una estructura formada por individuos de diferentes orígenes
sociales intentando obtener los privilegios de los cargos públicos, con cómodos y
lucrativos empleos que los ponían en una posición menos riesgosa que la de los
descubridores y colonizadores:
En el panorama general del virreinato hay una referencia de las disputas entre
las elites civiles y las eclesiásticas. Francisco Silvestre expresa que “el virreinato
8
Representación que hizo la Ciudad de México al rey don Carlos III en 1771 sobre que los criollos deben ser
preferidos a los europeos en la distribución de empleos y beneficios de estos reinos. México, mayo de 1771.
Fuente: J. E. Hernández y Dávalos. Historia de la Guerra de Independencia de México. Seis tomos. Primera edición
1877, José M. Sandoval, impresor. Edición facsimilar 1985. Instituto Nacional de Estudios Históricos de la
Revolución Mexicana. Comisión Nacional para las Celebraciones del 175 Aniversario de la Independencia
Nacional y 75 Aniversario de la Revolución Mexicana. Edición 2007. Universidad Nacional Autónoma de
México. Versión digitalizada por la UNAM: http://www.pim.unam.mx/catalogos/juanhdzc.html.
9
José María Ots Capadequí. España en América. Las instituciones coloniales. Bogotá: Universidad Nacional de
Colombia, 1952, pág. 70.
To ga d o s y L e t ra d o s
152
de Santa Fe es uno de los más pobres de América, pero es al mismo tiempo uno
de los más ricos” y aun cuando su población es poca en relación con la extensión
del territorio, con unos arreglos oportunos se podría convertir en uno de los más
poderosos de las indias.
Según Silvestre entre los medios que facilitaban este crecimiento estaba el
hecho de estrechar las relaciones entre los habitantes de la América española
con los de la península, con la obligación para el gobierno metropolitano de
mantener la religión y ejecutar las políticas, que resultaban en la máxima “se
acata pero no se cumple”. En otras palabras señala: “hacerlos ejecutar sin reserva,
y sin que queden en mero mandato”. También advierte sobre el hecho de acabar
con las disputas entre los criollos y los metropolitanos:
Silvestre. Op. cit., Descripción del Reyno de Santa Fe de Bogotá, pág. 225.
10
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
153
Una forma de probar los méritos para poder ejercer la profesión en las
Reales Audiencia, era la práctica de adjuntar con las solicitudes la prueba de
nobleza y origen legítimo de los aspirantes, así como su descendencia de una
noble casa de la genealogía española. La pureza de sangre, era una certificación
de nobleza e hidalguía que para los criollos de las colonias no era una auténtica
demostración de segregación, sino un mérito básico para el acceso a los grandes
11
Víctor Manuel Uribe-Urán. Vidas honorables. Abogados, Familia y Política en Colombia 1780-1850. Bogotá:
Fondo Ed. EAFIT, Banco de la República, 2008, pág. 81.
12
Ibíd, pág. 131.
To ga d o s y L e t ra d o s
154
Cfr. Castro Gómez. La postcolonialidad explicada a los niños (2005). Castro advierte como desde el discurso
13
de la superioridad racial hay una estrategia de dominio geopolítico y epistémico, en el argumento de Walter
Mignolo Capitalismo y geopolítica del conocimiento. El eurocentrismo y la filosofía de la liberación en el debate
intelectual contemporáneo (2001), de acuerdo con el Orbis universalis chirstianus, los territorios americanos son
la prolongación de la tierra de Jafet: “La evangelización fue, entonces, el imperativo estatal que determinó por qué
razón únicamente los “cristianos viejos”, es decir, las que personas que no se encontraban mezcladas con judíos, moros y
africanos (pueblos descendientes de Cam o de Sem), podían viajar y establecerse legítimamente en territorio americano.
El “Nuevo Mundo” se convirtió en el escenario natural para la prolongación del hombre blanco europeo y su cultura
cristiana. El discurso de la pureza de sangre es, de acuerdo con la interpretación de Mignolo, el primer imaginario
neocultural del sistema-mundo que se incorporó en el habitus de la población inmigrante europea, legitimando la
división étnica del trabajo y la transferencia de personas, capital y materias primas a nivel planetario” (pág. 55).
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
155
(…) Si saben que el pretendiente D.N., sus padres, y abuelos han sido tenidos,
y reputados por personas blancas, limpias, y sin mezcla de mulatos, negros, ni
otra casta baja, y están en casi posesión pacífica desde sus abuelos de la limpieza
de sangre: digan cuanto sepan, o hayan oído decir. (…) Si saben que dicho D.N.
pretendiente es de buena vida, y costumbres, recogido, y aplicado al estudio, y
que no tienen nota alguna que por leyes, y reales cédulas lo inhabilite para ser
admitido al colegio, y desempeñar con honor tan distinguido oficio15.
14
Ángel Almarza Villalobos. “La limpieza de sangre en el Colegio de Abogados de Caracas a finales del siglo
XVIII”, en: Fronteras de la historia. Instituto Colombiano de Antropología e Historia, No. 10, 2005, págs.
306-307.
15
Ibíd., pág. 390.
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156
16
Testimonio de los documentos presentados por Don Luis Tadeo Jiménez Abogado de la Audiencia y
Chancillería de Santafé de Bogota Nuevo Reyno de Granada. Archivo General de la Nación, Bogotá, Fondo
Colonia, legajo 1. Fol. 1-9 (ver anexo 5).
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158
Mónica Fortich Navarro. Literatura, historia y política. Una lectura de don Quijote en la Literatura Colonial
17
neogranadina. Bogotá: 2008, págs. 172-173. Se trata de las Bibliotecas de don Ignacio de Santa María (1783)
y don Manuel López de Castilla (1760) en el AGN, Sección Notarias, que permite ver el tema de la posesión
material libros como asunto relacionado con elite, en este caso comerciantes y hombre de milicia.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
159
Si bien, todos los supuestos apuntan a considerar que hubo una circulación
clandestina de libros destinados a apoyar los proceso de independencia y a
estimular círculos de discusión sobre las tesis centrales de la secularización del
poder monárquico y del papado, es necesario revisar la tesis de una contrarreforma
ilustrada que gozó de larga admiración y devoción entre muchos peninsulares y
criollos indianos.
La iglesia tuvo que luchar con estos herejes (al tiempo que la con reforma,
en el siglo XVI), sin embargo, expresa que fuera del averroismo, que encontró
adeptos en universidades de Italia y Francia, no hay una tradición fuerte de
ninguna de las diferentes escuelas impías entre el siglo XVI y XVII. Pero se
refiere a un caso especial con la obra de Maquiavelo, a quien luego desprecia y
18
Marcelino Menéndez y Pelayo. Historia de los heterodoxos españoles. Sección II, Ciencias, tomo VI, Buenos Aires:
Emecé Editores, 1945, pág. 9.
To ga d o s y L e t ra d o s
160
Si bien compartimos con Menéndez la idea de que todos los regalistas no fueron
herejes e impíos, es claro que los regalistas estaban más cerca de la ortodoxia, que
de una pretendida heterodoxia. Valdría la pena revisar la implicaciones reales y
más profundas de las elites regalistas neogranadinas en el siglo XVIII, en donde
se destacan figuras como el fiscal Francisco Antonio Moreno y Escandón, o
el bibliotecario y periodista Manuel del Socorro Rodríguez, regalista y realista
ferviente opositor de las ideas revolucionarias proindependentistas:
El Papel Periódico fue, sin duda, un difusor del sentimiento regalista. Su editor,
Don Manuel del Socorro Rodríguez fue fiel vasallo de la corona española y
un preclaro defensor del sistema monárquico mientras las circunstancias
(independencia de la Nueva Granada) así lo permitieron y así lo expresaba en su
hebdomadario: “El amor que debemos tributar á nuestros soberanos: el interés
que debemos tener en sus regocijos y la preferencia que debemos dar aún a los
más pequeños sucesos de nuestro natural Señor, no es una costumbre dimanada
solamente del voluntario consentimiento de los Pueblos; es una obligación
deducida del mismo centro de la Religión Christiana”22.
Hay dos posiciones básicas que analizar en la formación de las elites letradas
en el virreinato de Nueva Granada: la de los regalistas ilustrados y los regalistas
pro clericalistas. Así como hay que hacer una revisión de las implicaciones que
21
Ibíd., págs. 40-41.
22
Rafael Antolínez Camargo. El Papel Periódico de Santafé de Bogotá 1791-1797. Vehículo de las luces y la
contrarrevolución. Bogotá: Biblioteca Banco Popular, 1991, pág. 106.
To ga d o s y L e t ra d o s
162
“Me encerraron –decía– en unos de esos colegios en que no se veía otra cosa que
desatinos de materia prima; me pusieron a Vinnio en las manos, pero yo no había
nacido para jurisconsulto; a pesar de los castigos, reconvenciones y ejemplos, no
le pude tomar gusto a Justiniano, y perdí los tres años más preciosos de mi vida.
Así que recobré mi libertad por medio de un grado que no exige conocimientos,
me restituí a mi lugar”24.
Germán Arciniegas. El estudiante de la Mesa Redonda. Bogotá: Plaza y Janés, 1982, pág. 123.
23
(…) que todo forastero que se hallare residente en ella se haga presente el día de
hoy, precisamente, o al señor Oidor Decano o a los señores Alcaldes ordinarios,
dando razón y acreditando la legítima causa de su detención y residencia. Que
los dueños de casas o cualesquiera otra especie de habitación, donde se hallen
hospedados forasteros, den así mismo cuenta y los manifiesten en este día, bajo
igual apercibimiento de cárcel y demás penas arbitrarias (…).
Los estudiantes de provincia, estaban normalmente hospedados en dichas
residencias, además, como es natural de los extranjeros –Europeos – en general.
Como la intención era evitar sublevaciones al interior de la ciudad las medidas
estaban encaminadas a los forasteros, pero cuando el enemigo estaba adentro,
fueron necesarias acciones para asumir frontalmente la situación de los naturales
de las villas de San Gil, Socorro, Mogotes y otros pueblos. Los rectores de San
Bartolomé y del Rosario acogieron las peticiones de los Bandos y en el sentido
del último de ellos reportaron los nombres de los estudiantes que en dichos
colegios eran oriundos de esas poblaciones, desde donde los comuneros habían
comenzado su avanzada hacia Santafé:
De la relación proporcionada se deduce que estudiaban en San Bartolomé
5 socorranos ( Jerónimo Estévez, teólogo de 22 años, Amancio Monsalve, id
de 23, Francisco Ardila, filósofo de 21, Ignacio Bonafont, gramático de 21 e
Ignacio Ardila, id de 18); 4 de San José de los Confines, alias Culatas, 2 de
Charalá, 2 de Barichara y 4 de San Gil, a saber: Francisco Otero, teólogo de 24
años, Vicente González, id, Benedicto Uribe, filósofo de 16, y el fámulo Vicente
Parra, filósofo de 1925.
25
Roberto Tisnés. Caballero y Góngora y los comuneros. Bogotá: Instituto Colombiano de Cultura Hispánica. 1984,
pág. 160.
To ga d o s y L e t ra d o s
164
Cartagena, Neiva, Charalá, Tasco, Tunja, Popayán, Villa de Leiva, Girón, Suatá,
Honda, Mariquita, Ibagué, Chiquinquirá y de regiones más distantes como
Barinas, Maracaibo, Mérida o Madrid en España:
Planes de Estudios
para los abogados neogranadinos
De acuerdo con Soto es durante el gobierno del monarca Carlos III que
se da inicio a una serie de reformas para modernizar el estado español, en lo
que unos ha denominado “absolutismo ilustrado” y otros “despotismo ilustrado”,
buscando reformas económicas, administrativas y territoriales, además de las
educativas orientadas a la reforma de los planes de estudio de las universidades
desde la expulsión de los jesuitas desde 1768. A partir de las reformas en las
universidades de la metrópoli y las del Nuevo Reino de Granada, las propuestas
de creación de una Universidad Pública bajo el control y financiación del Estado,
se pedían con urgencia al monarca con el propósito de limitar las crecientes
influencias e injerencias de las órdenes religiosas.
Asi mismo, esta Real Cédula del 28 de noviembre de 1770 determina el método
a seguir. Se indica que: “Ninguna facultad ni cátedra se ha de dictar, ni escribir, y
que todas se ha (sic) de estudiar y explicar por los libros (…) no se ha de escribir
en las aulas de la universidad, deberá esta expresar los libros por donde se haya
de enseñar por ahora, y hasta tanto que se produzcan por la universidad Obras
más útiles para la enseñanza1.
De acuerdo con Soto los virreyes serán los encargados de hacer cumplir
las Cédulas del monarca ilustrado y fomentar las ideas y los planes para los
1
Diana Elvira Soto Arango. La reforma del Plan de estudios del fiscal Moreno y Escandón 1774-1779. Bogotá:
Universidad del Rosario, 2004, pág. 7.
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168
Si bien es cierto que los virreyes ilustrados eran agentes activos del progreso,
no se puede confundir su postura con la de apoyo al pensamiento liberal de
las ideas revolucionarias que provenían de Francia, Inglaterra y Norteamérica.
Por el contrario, como puede suponerse, su postura era rígida y drástica contra
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
169
2
Ibíd., p.13
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170
a vista de que aquellos vecinos que tienen alguna comodidad, remiten a sus
hijos a los colegios de esta capital (…)3.
3
Germán Colmenares. Relaciones e informes de los gobernantes de la Nueva Granada. Tomo I, Bogotá: Biblioteca
Banco Popular, 1989, pág. 239.
4
Ibíd., pág. 241.
5
Ibíd. Relación de gobierno del virrey José Ezpeleta a su sucesor Pedro Mendinueta. Tomo II, págs. 219, 220.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
171
Los que la tienen puede decirse que la han adquirido más bien en sus gabinetes,
a esfuerzo de un estudio particular, auxiliado de sus propios libros, que en los
colegios y aulas públicos, estando en ellas limitada toda la enseñanza a una
mediana latinidad, a la filosofía peripatética de Gaudin, a la teología y derechos
civil y canónico según el método y autores que prescribió la Junta de Estudios
de 13 de octubre del año de 1779, derogando al mismo tiempo el sabio plan que
regía apenas desde 74, formado por el Fiscal que fue de esta Real Audiencia,
D. Francisco Antonio Moreno, con una ilustración y método superiores a los
alcances literarios de sus contemporáneos. Con tales estudios nada ha podido
adelantarse a beneficio del país, siendo lo primero conocer sus producciones y
proporciones que aprovecharse de ellas (…)6.
Otro balance sobre el estado de las letras está en la obra de Rivas Sacconi
para quien el siglo XVIII es un periodo de transición. Según él, a partir del
reestablecimiento del virreinato en 1740 la corte virreinal, que congrega estos
vastos territorios, comienza a intensificar su vida cultural. En este repunte juega
un papel esencial la administración del Arzobispo Virrey Antonio Caballero y
Góngora, quien a pesar de poner mano fuerte en el gobierno se muestra generoso
con las artes. El virrey José de Ezpeleta (1789-1797) promueve hechos culturales
como la introducción de la imprenta (1738) la llegada de José Celestino Mutis
(1760) la Expedición Botánica (1738), el Plan de estudios para los Colegios
Mayores (1774) la creación de la primera Biblioteca Pública (Real Biblioteca
de Santafé (1777), la aparición de publicaciones periódicas (1785) el teatro y los
círculos literarios entre otros.
El plan, redactado, a instancias del virrey don Manuel de Guirior, por el fiscal
Francisco Antonio Moreno y Escandón y aprobado por la Junta Superior de
6
Ibíd. Relación de mando del Virrey Mendinueta al Virrey Amar y Borbón, tomo III, pág. 91.
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172
(…) Sin embvargo de ser esta ciudad de Santa Fee caueza de su virreynato y del
Nuebo Reyno de Granada, se enquentra tan desnuda del explendor de capital,
que careze aun de aquellos regulares ornatos que en lo político hermosean las
poblaciones, y siruen de fomento a sus naturales. Notorio es que se produze
fértiles prespicazes ingenios, y que por comunes no se detiene la admiración en
los progresos que hazen los más niños en hedad y letras, hasta disputar ventajas
a los provectos en el estudio; pero tamvién es constante que es más admirable
este aprovechamiento en un Reyno que para a- /(fol.5vto.) delantar e instruir
7
Soto Arango. Op. cit., pág. 171.
8
Rivas Sacconi. Op. cit., pág. 231.
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173
2. Desde los siglos pasados en que necesitaban los hijos de este Reyno ocurrir
a la Universidad de Lima para doctorarse, se presentó esta calamidad a su
Majestad que, deseoso de su alivio, por reales cédulas fechas en San Lorenzo a
veinte y siete de septiembre de mil quinientos noventa y cinco, mandó que la
Real Audiencia y muy reberendo Arzobispo le informasen de ello, y de la forma
en que se podrían fundar las cátedras y situar sus rentas; y con el motibo de las
contiendas que tuvieron las /(fol.6) religiones de Predicadores y de la Compañía
de esta ciudad, se creyó remedio vastante para este daño el otorgarseles como
efectivamente se concedió, a una y otra, la facultad de que pudiesen conferir
grados en facultades mayores10.
11. Pero con todo esto no sea bastante para dotar y mantener con seguridad
y permanencia las cátedras, cuyas rentas conviene sean proporcionadas para
sustentar con desencia a los que las sirvan, sin necesidad de ocurrir a otros
arvitros que los diviertan de este único objeto en que deven emplearse, es preciso
solicitar fondo para ello. Porque para merecer el nombre de Universidad Mayor,
/(fol.11) en que ya que no con toda perfección, que en los principios nunca se
logra, alo menos con formalidad y aprovechamiento, se enseñen las ciencias,
son por los menos indispensablemente necesarias doze cátedras, a saber: dos de
teología especulativa de prima y vísperas, una de moral, otros de Escriptura, dos
de cánones de prima y la de víperas, que podrá tratar algo sobre las decretales,
una de prima de leyes, otra de ynstituta, una de prima de medicina, cuya falta
causa compasión en el Reyno, una de artes y dos de latinidad. Sin emvargo de
que en casso de otorgarse el real permiso, se necesita con la amplitud necesaria
9
Guillermo Hernández de Alba. “Proyecto del Fiscal Moreno y Escandón para la erección de Universidad
Pública en el Virreinato de la Nueva Granada, con sede en la ciudad de Santa Fe de Bogotá. Año de 1768”, en:
Thesaurus, tomo XVI, num. 2 (1961) pág. 478.
10
Ibíd.
To ga d o s y L e t ra d o s
174
Eulogio Zudaire Huarte O.F.M. Por los rumbos de la ilustración, con el virrey Guirior. En: Quinto Centenario,
12
hacerle seguimiento a los frutos del nuevo plan. En la reunión del 13 de octubre
de 1779 se reúne la junta presidida por el visitador y regente del Nuevo Reino
de Granada, Juan Francisco Gutiérrez de Piñeres, un delegado del virrey Flórez,
el arzobispo de Santa Fe, Caballero y Góngora, Moreno y Escandón y otros
funcionarios reales, además del rector de la Universidad Tomística fray Juan José
Revilla, el rector de San Bartolomé Diego Tirado, el vicerrector del Colegio
de Nuestra Señora del Rosario Fernando Caicedo en representación del rector
Miguel José Masustegui, en esta reunión a pesar de los elogios a la competencia
del fiscal Moreno y Escandón se mostraron desencantados de los logros
acusando “falta de literatura e incompetencia del equipo docente”, pidiendo
retomar el método anterior al Plan, respetando la autonomía de los colegios
para los exámenes finales llamados “tremendas” y la necesidad de estudiar latín
en la formación de los bachilleres como condición de ingreso a la universidad.
En materia de derecho los cambios no fueron significativos:
13
Ibíd., pág. 134 cfr. Versión completa del Plan de estudios de la Junta de 20 de noviembre 1779. En: Archivo
General de la Nación, colonia, Fondo Colegio, tomo 2 folios 232-332 citado también por Diana Soto Arango.
Op. cit.
To ga d o s y L e t ra d o s
176
Por razones que no alcanzo, formaron en esa Junta los vocales el concepto de que
el Plan de estudios del Sr. Moreno… no había tenido efectos correspondientes
al deseo de todos ni a los que inflamaron a su autor; pero es constante que
leyendo con imparcialidad severa, es el mejor que pudo hacerse en aquel tiempo
y circunstancias14.
bastante, para que los catedráticos, sin devertirse a otro objeto, acudan a llenar
las obligaciones de su ministerio; y en esta ciudad las cátedras son pocas, la renta
muy tenua y a veces ninguna, siendo preciso el amor a la sabiduría y el laudable
celo de los literatos, mirando por el adelantamiento de los colegios donde han
cursado se empeñen en llevar el peso de la enseñanza (…)15.
(…) no deben ser admitidos a estudios los que no vinieren libres de estos dos
perniciosos espíritus y que el gobierno y los dos directores y maestros deben
velar sobre que no se introduzcan en las nuevas enseñanzas, ni que se toleren
sátiras en los asertos o argumentos, concurriendo recíproca y armoniosamente
los dos colegios a solemnizar los actos literarios, públicos de conclusiones,
convidando a los sujetos doctos, que parezcan convenientes, sin la obligación de
aligarse a que los conventos de Regulares concurran por medio de sus lectores,
15
Plan de estudios y método provisional para los colegios de Santafé, por ahora y hasta tanto que se erige Universidad
Pública, o su Majestad dispone otra cosa. Archivo General de Indias. Sección Quinta, Audiencia de Santafé,
Legajo 759. Archivo Jardín Botánico de Madrid. Sección Mutis, legajo 25, Archivo Histórico Nacional de
España Sección Colonia, Fondo Conventos, tomo 32 folios 95-107, sección colonia, fondo Colegios. Tomo 2,
folios 286-309. En: Diana Soto Arango. La ilustración en las Universidades y Colegios Mayores de Santafe, Quito
y Caracas: Estudio Bibliográfico v de Fuentes. Bogotá: Universidad Pedagógica Nacional, CIUP- COLCIENCIAS,
1994, págs. 147-148. Cfr. Con la versión de Guillermo Hernández de Alba. En: Boletín de Historia y
Antigüedades. Vol 23, no. 264-265.
To ga d o s y L e t ra d o s
178
a los argumentos, aunque podrían convidarse, según se estimare por útil, pero
siempre de modo que no se convierta el acto en tumulto de voces y empeño de
parcialidades con encono de las voluntades y detrimento de la caridad cristiana
y de la quietud pública16.
16
Soto Arango. Op. cit., pág. 149.
17
Cfr. con el documento exceso de abogados en el que tranza una discusión con el padre Buenaventura de la Orden
de Predicadores (Anexo).
18
Cfr. con el Plan de estudio de la Orden de Predicadores (Anexo).
19
Ibíd, pág. 149.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
179
Establece cómo al final de estos dos últimos los estudiantes suelen permanecer
en los Colegios para perfeccionar su instrucción y prepararse para la Oposición
de Cátedras. Ellos son bastante útiles a los Colegios porque estos individuos
sirven de guía a los estudiantes de cursos menores y pueden dar ejemplo a los
menos antiguos, por lo que deben gozar del apoyo de los rectores. Además
establece que a estos estudiantes puede “prescribírseles siendo teólogos, un año
de estudio de la historia eclesiástica tomando por norma a Natal, Alejandro y
el erudito Abad Fleuri, con cuya historia traducida al idioma latino, adquirirán
una erudición nada vulgar”20 y para los juristas ese año se aplican al estudio de
la Política y de todo lo que concierne al gobierno al interior del Estado, para lo
que se prescribió en España:
20
Ibíd., pág. 165.
21
Ibíd., pág. 165.
To ga d o s y L e t ra d o s
180
El límite entre las dos jurisdicciones era una preocupación del Fiscal quien
señalaba que hacía falta la formación en derecho de los Romanos, o “derecho
civil adoptado por el general consentimiento de las naciones” y el “derecho
patrio y canónico”23, al no existir facultades en las que se pudiera estudiar por
separado ambos derechos, se podía apelar a fijar un solo curso que los contuviera
a ambos pero que se ocupará de revisar sus fundamentos, principios, elementos e
importancia para que cada uno sirva luego a sus propósitos, en un plan de estudios
de cinco años, que se estiman suficientes para que el discípulo los comprenda.
El programa para cada uno de los años era muy básico y orientado a destacar
unos pocos textos esenciales para el proceso de aprendizaje, que comparado con
las obras que estaban disponibles en el virreinato coadyuva la posición de un
método laxo.
La idea era hacer más fácil el estudio a los cursantes y enfatizar en el derecho
civil sin descuidar el “derecho patrio”, de manera que se pudiera salvar el hecho de la
insuficiencia de fondos para separar la enseñanza de ambos, y dándole a cada curso
9 meses para distribuir el tiempo entre los Proemiales, con una instrucción sobre el
objeto de la jurisprudencia, su conducencia respecto al derecho público y privado.
El método pedía aprender de memoria los párrafos de la Instituta para percibir su
sentido y explicación y así mismo las reglas contenidas en los títulos de Verborum
significatione y Regulis Juris, con exposición de sus limitaciones y ampliaciones.
(…) podrá por ahora valerse el catedrático de Antonio Agustín, de las prenociones
canónicas de Douviat y de los que sobre estos asuntos expone eruditamente
Vanespen en su tratado histórico canónico, que podrá servir de pauta al catedrático,
para que con estos sólidos principios, en que se advierte el espíritu de la Iglesia y
la variedad de tiempos y sucesos con que ha tomado incremento su jurisdicción,
note la compete soberanía, por su nativa institución y por sus regalías, a efecto de
que con estas luces, puedan los estudiantes discernir en el resto de su carrera los
límites de ambas jurisdicciones y sus prerrogativas, (…)25.
23
Cfr. Clavero. Op. cit.
24
Ibíd. págs. 166-167.
25
Ibíd., págs. 167-168.
To ga d o s y L e t ra d o s
182
para los eclesiásticos y para los seculares que aspiran a ser canonistas, previniendo
la decadencia de la iglesia bajo la protección y asistencia real. En este tercer año
se debe informar a los discípulos sobre los Concilios, su autoridad y requisitos
legales, dejando lo dogmático a los Teólogos, sin dejar de mostrar la incidencia
monárquica en sus convocatorias y celebraciones. Recuerda no desconocer el
Tomo Regio del rey Carlos III para los concilios provinciales de América, por
las especiales circunstancias que lo hacen soberano, patrono y conquistador de
las Indias, de la mano de la Religión Católica para la propagación de la Fe.
se hizo con base en la Real Cédula de San Idelfonso de 22 de junio de 1771, para
los tres primeros cursos y en los dos siguientes se sigue la línea de los estatutos
de la Universidad de Alcalá. Los dos primeros se dedican al derecho romano y
su relación con el derecho español y la historia de Roma, permitiéndoles en el
sentir de Leodolpo Uprimny, una sólida formación basada en las Partidas, las
leyes de Castilla y las de Indias. Pero Zudaire agrega que la formación no perdía
de vista la clara definición de los límites entre el derecho canónico y el civil.
Frente al tema de los textos pondera los básicos, a seguir en el plan de Moreno
y que estaban en boga entre los peninsulares:
En nada difieren los libros de texto y de consulta de los que más bogaron en
España por los días de la ilustración: Elementa iuris civiles de Arnold Vinnen o
Vinnio, con notas de otro ilustre romanista, Joahn G. Hieneccius; Specimen
iuris ecclesiastici de Jean Doujt (1609-1681); Collationes Decretalium… del
arzobispo de Tarragona, Antonio Agustín, publicadas por Mayans y Siscar;
El Collegium universi iuris canonici, del eminente benedictino austriaco
Luis Ángel (1646-1728); Ius ecclesisticum, la obra escandalosa de Iovaniense
Bernard Van Espen (1646-1728), que desde 1703 tuvo sus obras incursas en
el índice de libros prohibidos27.
27
Eulogio Zudaire Huarte. “Por los rumbos de la ilustración, con el virrey Guirior”, en: Quinto Centenario,
11 Universidad Complutense de Madrid, 1986, p. 128, cita a Leopoldo Uprimy, “Capitalismo Calvinista”,
en: Universitas, Bogotá, 1953 no. 5 pág. 124 en relación a los efectos del plan de estudios comparado con la
formación de segunda mitad del siglo XX.
To ga d o s y L e t ra d o s
184
Con todo en este nuevo plan, la necesidad de cátedras sobre ciencias útiles
y la tajante diferencia entre derecho canónico y derecho civil, será un elemento
clave en la formación jurídica, que solo podrá hacerse tangible ya avanzado el
siglo XIX.
Guillermo Hernández de Alba. “Representación del arzobispo-virrey para promover la erección de una
28
universidad mayor en la ciudad de Santa fe de Bogotá (1787)”, en: Thesaurus, tomo XVI, num. 1, 1961, págs.
178-179.
Capítulo 9
Algunos manuales
para el estudio del derecho
Por otra parte, se encuentran las obras de juristas (canonistas y civilistas) del
virreinato, entre ellas se destaca el aporte de Francisco Suárez en la consolidación
del pensamiento político de los juristas y prohombres de la revolución de 1810,
en su afán por desconocer el orden legítimo imperante durante tres siglos, en
procura de la creación de un nuevo estado. Desde la misma escuela católica y
siguiendo la línea tomista y aristotélica, Suárez elabora un tratado de derecho
1
Rogelio Pérez Perdomo. Los abogados de América Latina. Una introducción histórica. Bogotá: Universidad
Externado de Colombia, 2004, págs. 28 y ss.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
187
Durante varios años penetró a fondo en todos los temas jurídicos, hasta
publicar en 1612 en Coimbra su Tractatus de Legibus ac Deo Legislatore, mirado
con justicia como “una Suma o Enciclopedia del Derecho, tanto natural
como positivo, tanto canónico como civil; consuetudinario y escrito; en que
todas las leyes, clasificadas en orden, se exponen y discuten en sus principios y
consecuencias con el concurso de todas las autoridades y opiniones conocidas”,
según el autorizado sentir de Adolfo Franck, Profesor del Instituto de Francia2.
De Soto, en De Iustitia et Iure, señala cómo Dios ordena el poder civil mediante
leyes naturales que participan de su ley eterna. Los hombres congregados se
ayudan unos a otros una vez formada la República, para gobernarse o delegar
el poder a un rey, en una clara referencia al poder espiritual y al temporal, de
origen divino pero distintas jurisdicciones: la eclesiástica y la civil. De Vitoria,
señala cómo las leyes dadas por la República obligan a todos, incluso al rey,
lo que es considerado un antecedente del estado de derecho y un freno a las
arbitrariedades del monarca. El mismo planteamiento seguiría, Bañez, con
De Fide, Spe, et Charitate, De Molina, en De iustitia et Iure, así como Juan de
Mariana, quien ocupa un lugar destacado por su incursión en temas históricos,
económicos, filosóficos y políticos, el más significativo aporte de Mariana a la
ciencia jurídica lo hace desde su obra De rege et Regis institutione (editada en
2
Rafael Gómez Hoyos. La revolución granadina de 1810. Ideario de una generación y de una época 1781-1821.
Tomo I, Bogotá: Instituto Colombiano de Cultura Hispánica, 1982, pág. 76, en cita del Comptes rendus de la
Academia de Ciencias Morales y Políticas de París, Tomo 53, 54, “les publicistes du XVIII siecle. L´Ecole de
la resistente: Suárez”.
To ga d o s y L e t ra d o s
188
Toledo: 1598 solo aparecerá publicado hasta 1845) en donde hace un análisis
crítico de los males del sistema monárquico3.
La prudencia humana, dizen señor, que tiene algo de adivina; pero yo sin tener
nada Della profetizo a V.M. por bien afortunado, finacer de padres nobles es
fortuna, y de sabios y nobles gran fortuna, porque si estos dan calidad, aquellos
califican el alma con su industria.
El Lic. Bermúdez
De Pedraca ( 2v)
3
Ibíd., Gómez Hoyos. Parte segunda: las ideas políticas del padre Suárez y de la Escuela española de los siglos
XVI, XVII y XVIII, págs. 75-144.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
189
Censura ( 3r)
( 4r)
Suma de la prorrogación del privilegio del Arte Legal
Asimismo tiene prorrogación por otros quatro años para imprimir la exposición
de los doze libros del Codice de Iustianiano, con la misma prohibicion, como
consta de la cedula original, despachada en el mismo día, mes y año que la de
arriba, ante el mismo secretario.
Suma de la Tassa
Los señores del Consejo Real de castilla tassaron cada pliego deste libro a quatro
maravedis y medio, como consta de la fee que dello dá Martin de Segura escribano
de Camara del Rei nuestro Señor en Madrid á 15. de Diciembre de 1632
Tiene sesenta y quatro pliegos, y a quatro maravedis y medio monta 288,
maravedis en papel. E.R.
para los abogados que realizaban las labores judiciales litigiosas en la Real
Audiencia o en las Cancillerías.
4
Op. cit. Historia de los Colegios de Abogados de España. Conferencia del Excmo. Sr. D. Manuel Iglesias Corral
en el Ilustre Colegio de Abogados de Málaga con motivo de su bicentenario. Manuel Iglesias Corral. Cita a
García Venero “Origen y vida del Ilustre Colegio de Madrid”.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
191
Libro primero.
De la justicia, derecho, ley, jurisdiccion, y fuero, su defincion, y exercicio de todo.
Capitulo primero
De la justicia, y Derecho
Definicion de la Justicia.
Al fol. 13. dice: El testamento abierto se podrá hacer en dos maneras, la primera,
ante tres testigos y un escribano; y la segunda, ante cinco testigos vecinos del Lugar; ó
de siete, sí forasteros ( en caso de no encontrarse otros) Ley I.Tit. 4 lib. 5 Recop. Son
hacerse cargo el Autor que esta ley previene que siendo hecho el Testamento
abierto ante Escribano y tres testigos, deben ser estos vecinos del Lugar donde
se otorgare; y no habiendo escribano, ante cinco testigos vecinos del mismo
lugar, pudiendo se habidos; y no habiéndolos, ni escribano, ante tres testigos,
tambien vecinos del Lugar, ó de siete, aunque sean forasteros de él; pero no
expresa dicha ley, no encontrándose otros, como lo supone el Doctor Berní.
Sobre la partición que forma al fol.48. dice en el 49. Tambien es de advertir que
en dicho testamento se menciona, que al tiempo y quando casó dicha Isabel Linares con
el referido su marido, su parte le constituyó dote 50. libras en tal especie. Y sin constar
del entrego de estas mas que por la declaración del padre en su testamento, pasa
el Doctor Berní á hecer cuerpo de ellas y adjudicación, no reparando que el
hijo no está teniendo á tomar en cuenta de su legítima lo que el padre declaráre
haberle dado por ella, respecto de ser factible querer perjudicar al hijo en
beneficio de los demás que tuviere, sino es que el tal hijo lo confiese ó se pruebe
por otro medio, en atención que la legitima no puede ser quitada ni gravada,
según la ley II. tit. 4 part. 6. sí solo por las causas prevenidas en otras leyes.
Los manuales de derecho adjetivo no son tan comunes y frecuentes como los de
derecho sustantivo, sin embargo, es importante señalar cómo para la época, y con
anterioridad al siglo XVIII, los textos podían gozar de ese doble carácter. Por otra
parte, como se observa en este manual de Derecho Público, el contenido temático
muestra la fusión entre asuntos civiles y eclesiásticos bajo la lógica de un derecho
que regula las relaciones entre el estado y los particulares y entre estos y el clero:
DERECHO PÚBLICO
Escrito en Francés por M. Domat y traducido al castellano por el dr. Don Juan
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
195
Tomo III libro primero con licencia en Madrid, en la imprenta de Benito Caro
MDCCLXXXVIII
Titulo XVI. De las comunidades de las ciudades y otros lugares, de los empleos
municipales, y del domicilio de cada uno. 129
Sec. I. De las diversas especies.
To ga d o s y L e t ra d o s
196
Otro manual que por sus reediciones es considerado una obra básica en
la formación de los juristas, bien sean abogados litigantes, jueces en ejercicio
de la magistratura o escribientes de los protocolos notariales, procuradores y
cualquier persona que estuviera interesada en conocer los fundamentos de la
jurisprudencia práctica, es la obra de José Febrero. El texto reformado por José
Marcos Gutiérrez, del cual citamos algunas notas del prólogo referidas a su
éxito en el año de 1825, en donde se publica la sexta edición de la obra en cinco
tomos, se puede apreciar su contenido:
El título de Febrero Reformado que hemos creido adaptable á esta obra, causará tal
vez extrañeza à muchos, por parecerles que la tan justamente celebrada Libraría de
Escribanos no necesitaba de ninguna reforma, al menos esencial, ò que difícilmente
podria encontrar un digno reformador. La favorable acogida que ha tenido en
5
José Febrero. Librería de escribanos, abogados y jueces. Edición reformada por José Marcos Gutiérrez, tomo
primero, parte primera, Madrid, 1825. Cfr. con las ediciones de finales del siglo XVIII. Página de portada.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
197
Las obras jurídicas, en las dos jurisdicciones, por regla general no sufren
controles rigurosos, ni censuras por el Tribunal del Santo Oficio7. En las
6
Ibíd., prólogo, págs. III, IV, V.
7
Es preciso un trabajo que documente ampliamente la censura inquisitorial a los textos jurídicos en las dos
jurisdicciones, basado en los listados del Index.
To ga d o s y L e t ra d o s
198
portadas y en las dedicatorias hay una autorización expresa del Rey, y las
respectivas licencias eclesiásticas. Las obras que estaban más cerca de la
censura eran aquellas de carácter filosófico, o de ciencias útiles que tuvieran
planteamientos contrarios al dogma católico, y a las tesis sobre la legitimidad
del poder monárquico. En las primeras por su condición de heréticas y en las
segundas por configurar el delito de traición, de sedición o cualquier otro que
atentara contra la potestad del rey.
En relación con los textos que se encuentran en las bibliotecas del periodo
hay registro de algunas obras que circularon en España y en las colonias, pero
que en virtud a los controles inquisitoriales salen de los fondos físicos, entre
ellas: la Ciencia de la Legislación, de Filangieri y Las Instituciones Políticas de
Bielefeld. Mientras que la obra de Bobadilla es un clásico, de obligada consulta
y connotada presencia.
8
Víctor M. Uribe-Urán. “Disputas entre Estado y Sociedad sobre la educación de los abogados a finales de
la etapa colonial en la Nueva Granada”, en: Historia y Sociedad, dic. 1996, No. 3, pág. 40. Ver sobre la obra
de Castillo de Bobadilla, el estudio de Uribe Urán. Preparando “mandarines. “Apuntes sobre la historia de la
ciencia administrativa y su enseñanza en Nueva Granada durante la Colonia y comienzos de la República,
1590-1850”, en: Revista Innovar, Universidad Nacional de Colombia, 1996, No. 7, enero-junio, págs. 87-97 El
tema es retomado en la obra Vidas Honorables. Op. cit., capítulo tercero.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
199
9
Gaetano Filangieri, nació en Nápoles en el 18 de agosto de 1752, de noble cuna, su padre César es Príncipe de
Arianelo y su madre María de Montalvo es hija de los duques de Fragnito. Tercer hijo, desde los 5 años entró
en la carrera Militar y condecorado con el grado de Alférez del regimiento de Samnio, aunque comienza sus
servicios en el año 1766, recibió una formación que correspondía a la época, con profusión en la lengua latina,
lo que le genera una animadversión que será entendida como falta de actitud para las letras, sin embargo su
pasión fue advertida a tiempo y su plan de estudios modificado. A los 17 años quiso dejar el servicio militar
para consagrarse a la letras y la filosofía, además de sus estudios de algebra, matemática y metafísica, porque
consideraba que el verdadero filósofo no debía desdechar ningún conocimiento, su pasión se centró en los
estudios de la moral, la política y la legislación que componen la verdadera ciencia de la legislación. A los 19
años meditó un plan para la educación pública y privada, y más tarde otra obra sobre la moral de los Príncipes
basada en la naturaleza y el orden social, que no concluye pero serán tenidas en la Ciencia de la legislación, y hacia
1774 toma la decisión de profesar como abogado y no para la magistratura o la política como deseaba su familia.
En ese año publica Reflexiones políticas sobre la última ley del soberano, relativa a la administración de Justicia. En
1777 fue nombrado Mayordomo de semana de S.M. y Gentil hombre de Cámara, y por esa epoca Oficial del
Cuerpo de voluntarios de Marina, muere en Italia en 1788 cuando apenas iba a cumplir 36 años.
To ga d o s y L e t ra d o s
200
Aunque había formado el plan entero, y tenía preparados los materiales para la
mayor parte de él, había escrito solamente dos tomos que comprendían el libro
primero y segundo de la obra. Dividíase esta en siete libros. En el primero se
propuso esponer las reglas de la ciencia legislativa: en el segundo discurrir acerca
de las leyes políticas y económicas: en el tercero, tratar de las leyes criminales:
en el cuarto, explicar la parte de la legislación que es relativa á la educación, á las
costumbres y á la instruccion pública: en el quinto, hablar de las leyes concernientes
á la religion: en el sesto, de las que se refieren á la propiedad: y en último, de las
que tienen por objeto la patria potestad, y del buen orden de las familias. Publicó
Filangieri á principios del año 1780 los tomos primero y segundo10.
De este periodo también procede la censura que el Tribunal del Santo Oficio
hace de su obra, seguramente, por las críticas que Filangieri hace contra el Clero.
Es así como, afirma Benjamín Constant, que las “voces insidiosas” que llegaron a
la congregación del Santo oficio, fueron determinantes de su inclusión al Index,
aunque ello no afectará el fenómeno de su acogida y rápidas traducciones:
11
Ibíd., pág. 78.
12
Ibíd., págs. 79-80.
To ga d o s y L e t ra d o s
202
Por otra parte, Morelli, cita los aportes de difusión hechos por el español José
Pérez Calama, obispo de Quito (1790-1792), poseedor de una gran biblioteca
que deja a la universidad, que trae consigo desde 1765 cuando se radica en
México, en Puebla, y luego en Michoacán y se convierte en una de las figuras más
importantes de la ilustración hispanoamericana, responsable de una reforma al
Federica Morelli. “Filangieri y la «Otra América»: historia de una recepción”, en: Revista Facultad de Derecho y
13
Ciencias Políticas, vol. 37, No. 107, julio-diciembre, 2007, pág. 490, traducción de Andrés Botero Bernal.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
203
En el famoso plan de estudios del 1774 del Fiscal Francisco Antonio Moreno
y Escandón, se cita esta obra como un texto esencial para los juristas, y para los
funcionarios en ejercicio de actividades públicas. La obra no debió ser conocida
en esa época y en proceso de revisión del corpus material y de circulación la
misma, apunta a que, por lo menos, en el XVIII brilla por su ausencia en las
bibliotecas privadas.
14
Ibíd., págs. 492-493.
To ga d o s y L e t ra d o s
204
La obra escrita por el consejero del rey de Prusia Federico Jacob Friedrich
von Bielefeld, Instituciones políticas15 (citada como Biefeld en las anotaciones
de Moreno y Escandón) gozó de varias ediciones y se proyectaba como un
buen sustituto de la Política de Bobadilla del Castillo, el que fue considerado
manual esencial de administración pública y conocimiento básico del manejo
del Estado16.
15
Institutions polítiques (1760), 3 vols. (Leiden and Leipzing, 1768) Se conoce la obra que fue importante en la
obra del español Valentín Foronda, autor de tratados sobre la ciencia de la administración como y un tratado
sobre policía denominado Cartas sobre la Policia (1783-1800) y que fueron perseguidas por la inquisición desde
1801 a 1814. se considera a Foronda un traductor parcial de la Obra de Bielefeld. Se cita una edición completa
al español como Jacobo Federico von Bielefeld, Instituciones políticas, Madrid, oficina de la Viuda de Manuel
Hernández, dos tomos 1768 (1761-1762). La obra es citada en: Antonio Álvarez de Morales. La ilustración y la
reforma de la Universidad en España del siglo XVIII. Ed. Pegaso - Universidad de Michigan, 1985.
16
Sobre la obra de Bobadilla, escrita en 1597, y su papel esencial en la formación de juristas, y en especial en
lo relativo a la ciencia de la policía, es significativo el trabajo del Miguel Malagón Pinzón, Vivir en Policia:
una contralectura de los orígenes del derecho administrativo colombiano (2007) y que tiene la importancia en el
proceso de expansión del absolutismo monárquico. La policía era entendida como “buena gobernación de
ciudad que abraza todos los buenos gobiernos, que trata y ordena las cosas corporales que tocan a la policía,
conservación y buen encaminamiento de los hombres” (págs. 154-155). Además, los estudios de Uribe-Urán
que han sido citados en esta investigación y que serán objeto de estudios más detenidos cuando se aborden las
particularidades de algunos libros considerados básicos para los juristas en España y el nuevo mundo en los
siglos XVI al XVIII. Igualmente la mención el capítulo tercero de la obra de Uribe-Urán, Vidas honorables.
Abogados, Familia y Política. Op. cit., págs. 89-91.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
205
Los temas recurrentes en estos Kalendarios son las cronologías de los reyes de
España y nobles pertenecientes a las Cortes, las relaciones de los reyes y nobles
del resto de Europa, sus cumpleaños, decesos y nacimientos. Los calendarios
mensuales con relación de los nombres del santoral católico, las ferias y los
feriados, parroquias, funcionarios reales y eclesiásticos en tribunales de España
y América, tribunales, consejos, audiencias, hospitales, academias, tasas para
cambio de monedas y tráfico de correos.
17
Omar Guerrero. Las ciencias de la administración en el Estado absolutista. La teoría de administración pública en
las ciencias camerales y en doctrina de la Policía en Europa entre los siglos XVI y XVIII. México: Ed. Fontanamara,
1986, págs. 195-197, cita las obras de Juan Enrique von Justi: Reflexiones sobre el establecimiento de una buena
policía (1736) e Instrucción útil sobre la policía más ventajosa al gobierno (1753), además de la obra de Bielefeld,
Instituciones políticas (1760); la de Willebrandt, Introducción a la policía (1765) y Huhenthal, Liber de politia
(fecha desconocida). Pero también hace referencia a las otras obras producidas en España durante el siglo
dieciocho: Francisco Romá y Rossell, Las señales de la felicidad de España y medios de hacerlas eficaces (1768);
Manuel Nicolás Marín, Discurso sobre la policía (1792); Valentín de Foronda, Cartas sobre policía (1792) y Tomás
de Valeriola, Idea general de policía (1789-1805) aun cuando la primera obra sobre esa materia es del mexicano
Hipólito Villaroel (1787).
To ga d o s y L e t ra d o s
206
Estudios Reales
Fundados en esta corte por el Sr. D. Felipe Quarto en el año de 1625, y
establecidos por S.M. en el de 1770
El señor Don Manuel de Villafañe, de Consejo de S.M. en la Sala de Alcaldes
de Real Casa y Corte, Director
El señor Don Josef. Irusta, Bibliotecario primero
18
Kalendario Manual y Guía de Forasteros en Madrid. Biblioteca Nacional de España. Edición digital, año de 1744
(MDCCXLIV). La ortografía del original.
19
Ibíd., 1745 (MDCCXLV).
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
207
BIBLIOTECA REAL
Ilmo. Sr. D. Francisco Perez Bayer, del Consejo y Cámara de S. M. Preceptor de
los Señores infantes, Bibliotecario Mayor.
Señores Bibliotecarios
D. Miguel Casari
D. Tomas Sanchez
D. ………..
D…………
Tesorero Administrador
D. Manuel Montefort
La Real Biblioteca está abierta para el público todos los dias del año, excepto las
fiestas de guardar, las de Consejo, y las temporadas del estero y desestero.
BIBLIOTECA REAL
Sr. Don Pedro Luis Blanco, del Consejo de S.M. Bibliotecario Mayor
Señores Bibliotecarios
D. Tomas Antonio Sanchez
D. Juan Antonio Pellicer
D. Elias Scidiac
D. Guillermo Lopez Bustamente
D. Pablo Lozano, Supernumerario
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
209
Cada vez son más frecuentes los estudios sobre bibliotecas hispanoamericanas
y sus relaciones con los procesos ilustrados en la metrópoli y en las colonias.
La transcripción de los acervos bibliográficos que poseían estos ilustrados es
la mejor herramienta para revisar los procesos de recepción y circulación física
y simbólica de los libros. En el mundo, colonial, las bibliotecas pasan de un
ilustrado a otro estableciendo un elemento de conexión familiar, bien sea por
herencias o dotes, o bien por relaciones civiles que en virtud del valor material
de las mismas, eran objeto de secuestros para garantizar el cumplimiento de
obligaciones pecuniarias.
Ya hemos advertido que los libros son en cierta manera bienes suntuosos,
objetos de valor, y que por los costos editoriales y los procesos de comercialización
se encarecían considerablemente. Una biblioteca hacía parte de los bienes
significativos del patrimonio, al lado de objetos como piezas de arte, joyas,
muebles e incluso prendas de vestir. Las Cartas de dote que pueden rastrearse en
los protocolos notariales son un excelente instrumento historiográfico:
To ga d o s y L e t ra d o s
210
Una carta de dote no es otra cosa que un instrumento público, realizado ante
notario, que es la persona que debe autorizarlo, y en donde se recogen, con
más o menos minuciosidad, todas y cada una de las pertenencias que la mujer
aporta al matrimonio, aunque con cierta frecuencia también los maridos hacen
relación de sus bienes que ellos mismos llevan a la unión. Las cartas de dote son
documentos de gran interés para el conocimiento de un determinado período
de la historia, y que además nos informan de los gustos, aficiones y cultura de
sus otorgantes20.
La librería que Dña. Josefa Álvarez de Ribera llevó en su dote y que había
heredado de su padre constaba de 118 títulos que formaban un total de
214 tomos, y aunque la temática era en su mayor parte jurídica, también se
registraban obras religiosas, de historia, economía, filosofía, ascética y mística,
militares, novelas, biografías, etc. Esta variedad de temas nos confirma en la
hipótesis de que una biblioteca era a la vez un instrumento de trabajo, en este
caso relacionada con la profesión de abogado de su poseedor, y una opción
cultural de entera libertad21.
En los diversos temas y títulos que se destacan en esta biblioteca, las obras
jurídicas recogen buena parte de las que circulaban en la segunda mitad del
XVIII, como textos de formación y consulta obligada:
Entre las obras de derecho se contaban las de los autores tan prestigiosos como
Juan Salgado de Somoza, Gil de Castejón, Cristóbal Paz, Juan Solórzano
Pereira, Tomás Carleval, Antonio Gómez, Alfonso Olea, José Maldonado y
20
José Luis Barrio Moya. “Libros jurídicos en la carta de dote del abogado cántabro D. Bartolomé Tejo de la
Corte (1747)”, en: Anuario Jurídico y Económico Escurialense, tomo XXXVIII, 2005, 673 págs. Son muchos
los inventarios realizados en España, sobre las bibliotecas de juristas, de hecho también se puede citar del
mismo autor el ensayo: “Los libros jurídicos de D. Bernardo Fernández de Velasco, XI Duque de Frías (1771)”,
en: Anuario Jurídico y Económico Escurialense, tomo XXXIX, 2006, que cuenta con un buen número de obras.
Igualmente se puede citar la biblioteca los inventarios de libros jurídicos en las colecciones bibliográficas
españolas, que eran muy comunes en los siglos XVI al XVIII.
21
Ibíd., pág. 677.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
211
Libros en folio
22
Ibíd., pág. 677.
23
Primero se cita la relación de los títulos originales y después, entre paréntesis, las notas del autor confrontando
el título completo y otros datos editoriales.
To ga d o s y L e t ra d o s
212
Libros en 4º
Muchos de los libros que hemos citado, aparecen en las bibliotecas del nuevo
mundo, en los colegios mayores, en especial en la Real Biblioteca de Santafé,
salvo las obras que fueron excluidas por el Índice de libros prohibidos y que
circularon de manera clandestina hasta bien entrado el siglo diecinueve.
Capítulo 10
1
Armando Martínez Garnica. Legitimidad y proyectos Políticos en los orígenes del gobierno del Nuevo Reino de
Granada. Bogotá: Banco de la República, 1992.
2
José Sánchez-Arcilla Bernal. “En torno al Derecho indiano vulgar”, en: Cuadernos de Historia del Derecho,
Madrid, No. 1, 1994, pág. 13.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
217
Ese hecho es posible en los protocolos notariales, aun cuando los escribanos
se cuidaran de incurrir en adulteraciones por trabajar sobre formularios, pero en
el caso de los documentos judiciales los atecnicismos son mayores por la falta de
preparación de los alcaldes locales, sobre todo en las ciudades que eran sedes de
Audiencias. Eso nos lleva a extender el fenómeno de la vulgarización más que
a versiones de malos glosadores y comentaristas, a la deficiente formación de
los juristas por la falta de bibliotecas básicas en el nivel culto, desconocimiento
acerca de los tratadistas y textos legales esenciales.
3
Cfr. con Bartolomé Clavero, en lo relativo a la vulgarización el derecho común europeo.
4
Cfr. con las anotaciones que al respecto de la denominación derecho indiano o derecho colonial, se establecen en
el ensayo de Miguel Malagón Pinzón, “Derecho indiano como derecho neocolonial”, en: Revista de la Facultad
de derecho de la Universidad de Medellín, diciembre de 2008, en donde se resuelve a favor de la denominación
“derecho neocolonial”.
5
Ibíd., págs. 23-24.
To ga d o s y L e t ra d o s
218
El autor también aborda las “visitas” de los funcionarios del Santo oficio
para husmear y decomisar todo lo que tuviera visos de “libros heréticos”. Por
otra parte relata el florecimiento del mercado del libro mexicano favorecido
con el auge de las imprentas locales, pero sobre todo con las importaciones de
textos que se destinaban por su valor a miembros del clero y seglares con gran
capacidad adquisitiva. El valor de los libros en el nuevo mundo era superado
ampliamente con relación a España.
• Dos Hordenancas rreales de Castilla a peso y ducado- III pesos IIII tomines
(Alfonso Díaz de Montalvo, copilador)
• Seys Libros de la Verdad a peso y ducado-III pesos IIII tomines (Pedro de
Medina)
• Seys Estilos de escriuanos y abisos de juezes a peso cada vno- VI pesos (¿Juan
de Iciar, o Juan de Leras, o Gaspar de Tejeda?)
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
219
6
Las referencias entre paréntesis son del autor. Se registran 130 títulos en total, aunque en algunos aparecen más
de un ejemplar por título. La selección que proponemos está hecha con base en la cercanía de los títulos con
referencias ya conocidas o que no ofrecen duda de su contenido jurídico.
7
En una relación de 248 títulos.
To ga d o s y L e t ra d o s
220
3. Escritura de Francisco de la Hoz a Juan Jiménez del Rio (Ciudad de los Reyes
(Lima), 22 de febrero de 1583)
8
En una relación de 142 títulos.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
221
9
Guillermo Hernández de Alba y Rafael Martínez Briceño. Una biblioteca de Santa Fe de Bogotá en el siglo
XVIII. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo, 1960, págs. 9-32. Archivo Histórico Nacional de Colombia, registros
notariales, Notaría 1, No. 65. 1664, fols. 522 r a 539v. las obras que se citan son selección nuestra con base en el
título y autor conocido. Sin embargo, los autores señalan la dificultad de su identificación en virtud a la forma
en que se acostumbraba hacer la transcripción de los inventarios en la época.
To ga d o s y L e t ra d o s
222
Otra de las grandes bibliotecas del siglo XVII, que será un antecedente de
las colecciones bibliográficas de las órdenes religiosas, es la de Arias de Ugarte
(1561-1638) quien también es considerado uno de los intelectuales criollos con
una carrera destacada en la judicatura y el clero. Graduado de doctor en ambos
derechos en la Facultad de Leyes de Universidad de Salamanca, desempeña su
profesión como abogado de la Corte. Regresa a las Indias en 1595 como Oidor
en la Audiencia de Panamá y luego lo sería en la de Chacras y Lima. No obstante
su brillante carrera, deja la magistratura para ingresar al Clero episcopal donde se
ordena sacerdote en 1607 y es nombrado obispo en 1614. En consecuencia de ello
ordena el inventario de sus bienes, y la tasación de su biblioteca que corresponde
al librero Andrés de Hornillos. Arias de Ugarte posee una de las colecciones más
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
223
importantes y costosas de la época (30.598 reales) y entre los libros más costosos
del prelado se encuentran los tratados de jurisperitos, unos 28 tomos (estimados en
300 pesos) que eran textos indispensables para la formación del derecho común.
(…) un par de ediciones del corpus juris civilis, integrado por sus cinco volúmenes
tradicionales. Sesudos comentarios se destinaron a ilustrar esos textos y a sentar la
doctrina vigente durante la baja Edad Media en Europa; podemos citar, a propósito,
las obras de los maestros italianos Bártolo, Baldo, Paulo de Castro y Giasone de
Maino (catedráticos de Bolonia y Padua), que formaban parte de la colección que
interesa. El arzobispo poseía también algunas lecturas sobre partes específicas del
corpus, como el Digesto viejo, la Instituta o los tres últimos libros del Código10.
Los textos del inventario manuscrito, de acuerdo con Hampe, son muestra
de la evolución del sistema legal hispánico hasta el siglo XVII, en donde se
pueden apreciar los fueros de Aragón y Navarra, ordenanzas de las audiencias de
Valladolid, Granada y Sevilla, los llamados privilegios del gremio de ganaderos
de Mesta, las constituciones de las Universidades de Salamanca y Lima.
También están Las Partidas y Fueros de Alfonso X, con jurisdicción en todos
los reinos castellanos, y la Nueva recopilación de 1567 de Felipe II, además
de compilaciones de Leyes de Indias. Figuran un buen número de glosas de
consejeros reales, magistrados y profesores universitarios sobre las leyes de
Castilla y siete glosadores de las Leyes de Toro.
10
Teodoro Hampe Martínez. “La biblioteca del Arzobispo Hernando Arias de Ugarte. Bagaje intelectual de un
prelado criollo (1614)”, en: Thesaurus, XLII, num.2, mayo-agosto, 1987, págs. 341-342.
11
Clavero. Op. cit.
To ga d o s y L e t ra d o s
224
Agrega Hampe que uno de los medios usados para “vulgarizar” el derecho
común fueron las recopilaciones, en las que publicaban los tratados de autores
significativos, como los Tratados diversorum doctorum y las comunes opinione.
Se destacan las compilaciones individuales como la del francés Tiraqueau, el
civilista Italiano Alciati, los españoles Navarro Azpilcueta, Rodrigo Suárez,
Soto, y Covarrubias de Leyva.
En la ciudad de los Reyes, en onze días del mes de octubre de este dicho año
(1614), se prosiguió el dicho inventario en lo tocante a la librería del estudio del
dicho señor obispo, y los libros que en él se hallaron y la tasación que de dellos
hizo Andrés de Ornillos, librero, persona nombrada por el dicho alcalde (capitan
Diego de Agüero) para ella, auiendo primero jurado y visto los dichos libros uno
por uno y los títulos que tenían, todo lo qual es en la manera siguiente13:
13
Ibíd., págs. 346-361. se trascriben con el número del ítem de acuerdo a Hampe, quien anota en paréntesis
el dato completo del texto después de confrontarlo con la Obra de Palau y Dulcet, Manual del librero
hispanoamericano. et ál.
To ga d o s y L e t ra d o s
226
319) Tello Hernández en las leyes de Toro, 24 rs. (Tello Fernández Messía,
Commentaria in constituciones Taurinas)
320) Guillén en las leyes de Toro, 32 rs. ( Juan Guillén de Cervantes, Prima pars
commentariorum in leges Tauri, Madrid 1594)
321) Antonio Gómez en las leyes de Toro, 64 rs. (Ad leges Tauri
commentarius)
322) Antonio Gómez sus tratados, 64 rs. (Variae resoluciones juris civiles
communis et regis)
323) Abendaño in capitulis praetorum, 16 rs. (Pedro Núñez de Avendaño, De
exequandis mandatos regué Hispaniae)
324) Responsos de Abendaño, 24 rs. (Pedro Núñez de Avendaño, Quadraginta
responsa)
325) Abilés in capitulis praetorum, 32 rs. (Francisco de Avilés, Expositio
capitum seu legum praetorum ac judicum syndicatus Hispaniae)
326) Politicas de Bobadilla en dos tomos, 240 rs. ( Jerónimo Castillo de
Bovadilla, Política para corregidores y señores de vasallos en tiempos de paz y
de guerra)
327) Obras de Rodrigo Juárez con adiciones de Valdés en dos tomos,160 rs.
(Rodrigo Suárez, lecturae sive repeticiones, ed. De Diego Valdés)
328) Concordata de Ximenes, 64 rs. (Sebastián Jiménez, Concordantiae
utriusque juris civiles et canonici)
329) Parladorio primera y segunda parte, 48 rs. ( Joannes Yañez Parladorius,
Rerum quotidianarum)
330) Flores Dias en las prácticas criminales, 40 rs. (Blas Floréz Díaz de Mena,
Recentiorum practicarum questionem juris canonicia et civiles)
331) Juan Gutiérrez de iuramento confirmatorio (tractatus de juramento
confirmatorio)
332) Juan Gutiérrez navegaciones (sic) y repeticiones (Repeticiones sez et
quatuordecim juris allegationes, Madrid, 1604)
333) Juan Gutiérrez cuestiones canónicas en dos tomos (Canonicarum
quaestionum utriusque fori)
334) Juan Gutiérrez practica criminales en dos tomos (Practicarum quaestionum
circa legis regias Hispaniae); estos seis tomos, 320 rs.
335) Mexía en la pregmática del pan, 24 rs. (Luis Mejía y Ponce de León,
Laconismos seu chilonium pro pragmaticae panis elucidatione, Sevilla 1569)
336) Couarrubias dos tomos, 192 rs. (Diego Covarrubias de Leyva, Omnia
Opera)
337) Molina de primogeniis, 48 rs. (Luis de Molina Morales, De Hispanorum
primogeniis)
338) Pelaes de maioratu, 32 rs. (Melchor Pelaéz de Mieres, Tractatus majoratuum
et meliorationum Hispaniae, Granada 1575)
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
233
388) Historia general de Yndias de Herrera en dos tomos, 192 rs. (Antonio de
Herrera y Tordesillas, Historia general de los hechos de los castellanos en las
islas i tierra firme de Mar Océano, Madrid, 1601, 2v.)
389) Historia de Pirú de Çárate, 48 rs. (Agustín de Zárate, Historia del
descubrimiento y conquista de las provincias del Perú, Sevilla 1577)
390) Historia del Pirú de Diego Hernández vieja, 32 rs. (Diego Fernández de
Palencia, Primera y segunda parte de la historia del Perú, Sevilla 1571)
391) Comentarios de Aluaro Nuñez Cabeça de Baca, 24 rs.
392) Libro del P. Castellanos viejo, 16 rs. ( Juan de Castellanos, Primera parte
de las elegías de varones ilustres de Indias, Madrid 1589)
393) Historia de las Filipinas, 12 rs.
394) Historia del P. Acosta de Yndias, 16 rs. ( José de Acosta, Historia natural
y moral de las Indias)
395) Dragontea de Lope de Vega, 16 rs. (La Dragontea, Valencia 1598)
396) Historia de don Luis de Auila, 4 rs. (Luis de Avila y Zuñiga, Comentario
de la guerra de Alemania hecho por Carlos V)
397) Historia de Inglaterra en dos tomos, 48 rs.
398) Heroycos hechos de varones ilustres con estampas, 16 rs.
399) Arte y vocabulario de la lengua de yndios (?), 48 rs.
400) Símbolo del P. Oré, 24 rs. (Luis Jerónimo de Oré, Símbolo católico
indiano, Lima 1598)
401) Dos artes de la lengua de Chile, 24 rs. (Luis de Valdivia, Arte y gramatica
general de la lengua que corre en todo el reyno de Chile, Lima 1606)
402) Arte y vocabulario de la lengua quichua, 16 rs. (Diego Gónzalez Holguín,
Arte y vocabulario en la lengua general del Perú llamada quichua, Lima 1614)
403) Libro de las exequias de la reyna, 8 rs.
404) El quilatador de plata y oro, 8 rs. ( Juan de Arfe de Villafañe, Quilatador
de la plata, oro y piedras)
405) Reduciones de Verbedel, 16 rs. ( Juan de Belveder, Libro general de las
reducciones de palata y oro, Lima 1597)
406) Reducciones de Barriguilla, 24 rs. ( Juan Garreguilla, Libro de plata
reduzida, Lima 1607)
407) Obras de Juan de la Cueba, 4 rs.
408) Osorio de nobilitate, 24 rs ( Jerónimo Osorio, de nobilitate christiana)
409) Vocabulario de Antonio, 32 rs (Antonio de Nebrija)
410) Itinerario general en 16º, 8 rs.
411) Diccionario de quatro lenguas, 8rs.
412) Raçon de estado de Herrera, 16 rs.
413) Marco Aurelio, 16 rs. (Antonio de Guevara, Libro áureo de Marco Aurelio)
414) De statibus Francie, 8 rs.
415) Doze libros de gramática, 96 rs.
To ga d o s y L e t ra d o s
236
Del ítem 70 al 136 de los títulos que registra el librero Andrés de Hornillos,
a su juicio, corresponden al derecho canónico, sin embargo, el tema de las
clasificaciones genera algunas dudas sobre dónde se deben buscar los títulos
de una biblioteca jurídica y sus límites con otras materias, en especial con los
canónicos. Las confusiones entre los dos derechos es un tema presente en el
siglo XVI y hasta bien entrado el XVIII. En el inventario y tasación de los libros
eclesiales figuran títulos que hacen pensar, más bien, en asuntos judiciales, como
por ejemplo:
La figura de Virrey José Solís es una de las más importantes del periodo
de estudio, y sobre todo teniendo en cuenta que tuvo una biblioteca como
funcionario del Estado, que luego pasó a manos del clero cuando este decide
recluirse en la orden franciscana. A su llegada llegada de España en (1753) trae
consigo una biblioteca básica para el desempeño de sus funciones oficiales como
virrey del Nuevo Reino de Granada. La formación de Solís es la de un hombre
de armas y no la de un jurista. No ejerció la jurisprudencia como abogado
aunque realizó muchos actos propios de la profesión. De hecho son frecuentes
las críticas que se le hicieron al respecto y en especial la controversia que tuvo
con la Real Audiencia en el año de 1757 por querer excederse en sus funciones.
Entre los títulos hallados en el inventario de sus objetos personales, cuando se le
conoce como el frayle Joseph de Jesús María, tenemos:
Libros de a folio:
14
Luis Carlos Mantilla O.F.M., La biblioteca del Virrey Frayle. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo, 1989, págs. 11,
12, en el estudio preliminar a la transcripción de la biblioteca de 115 títulos, independiente de los tomos en cada
uno, se destacan las obras de contenido histórico, y algunos textos que por la falta de transcripción de su autor
y nombre de la obra no es posible ubicarlas claramente en un género.
15
Ibíd., págs. 14-19 las notas en paréntesis corresponden a Mantilla.
To ga d o s y L e t ra d o s
238
La formación intelectual del español Juan José D`Elhuyar remite a una de las
figuras más importantes de la ilustración neogranadina y es considerado junto
con su hermano Fausto, uno de los motores de la Real Expedición Botánica
del Nuevo Reyno de Granada. Reconocido por el Barón Humboldt como un
gran gestor de “las labores de Santa Ana” y como “sabio” por el mismo José
Celestino Mutis, tiene una biblioteca que prueba su conocimiento e interés
por las Ciencias. Sin embargo, en una revisión de 166 títulos que registra el
inventario de sus libros de química, física, matemática, metalurgia y minería,
podemos destacar algunas obras de contenido literario, político, histórico y
legal, ellas son:
16
La biblioteca de don Juan José D´Elhuyar. Archivo Nacional. Protocolo de Notaría Segunda. Tomo único (1797-
98-99) folio 339-344v, octubre 22 de 1796. “Inventario de la biblioteca del difunto D. Joseph D´Elhuyar
efectuado en Santafé a 22 de octubre de 1796 por los avaluadores Dn. Jph. Acevedo, D. Santiago Umaña, Juan
Jph. Roxas Ygno (Ignacio) Estrada Cubides y Eustaquio Cavallero (sic)”, en: Bernardo Caycedo, D´Elhuyar y el
siglo XVIII neogranadino, Bogotá: 1971, págs. 303-308.
To ga d o s y L e t ra d o s
240
Biblioteca de Manuel del Socorro Rodríguez, Santafé de Bogotá, 1º de junio de 1796. Archivo Histórico
17
Nacional. Salón Colonia. Cartas de Empleados públicos, 4 fols. 528-533. En: Historia de la Biblioteca
Nacional de Colombia. Guillermo Hernández de Alba y Juan Carrasquilla Botero. Bogotá: Instituto Caro y
Cuervo, 1977, págs. 63-68.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
241
Entre las obras citadas por Ruiz Martínez18, en el XVIII, que corresponden
a la librería de Antonio Nariño encontramos varios textos jurídico-políticos.
Se ha propuesto que estas obras aportaron elementos a la formación de una
conciencia de lo propio, y que fueron vitales para la causa independentista,
porque representaban la máxima expresión de la heterodoxia francesa y el
espíritu revolucionario y antiregalista. Entre los textos citados tenemos:
1. Institution d´un Prince ou Traité des qualités, des vertus, des devoirs dé un
Souveraim (1739) Santiago José Daguet.
2. Cartas morales, militares, civiles i literarias de varios autores españoles,
recogidas y publicadas por don Gregorio Mayans i Siscar, del consejo del Rey
Nuestro Señor i alcalde honorario de su Real Casa y Corte (1740).
3. Theorica y Práctica de comercio y marina en diferentes discursos y
calificados ejemplares, que con específicas providencias, se procuran adaptar a la
Monarchia Española, par su promta restauración, beneficio universal, y mayor
fortaleza contra los émulos de la Real Corona: mediante la soberana protección
del rey Nuestro Señor don Phelipe V. (1670aprox-1740aprox) Don Jerónimo de
Uztariz.
4. Instituciones del derecho civil de castilla (1771) Ignacio Jordan de Asso y
Miguel de Manuel y Rodríguez.
5. Elementos del Derecho Público, de la Paz y de la Guerra, ilustrados con
noticias históricas, leyes y doctrinas de le derecho español. (1771) Joseph de
Olméda y León.
6. El verdadero mentor, ó educación de la Nobleza (1783) Marquez
Domenico de Caracciolo.
7. Compendio del Derecho Público y Común de España o de las Leyes de
las Siete Partidas, colocado en orden natural (1784) Vicente Vizcaíno Pérez
8. Plan de Educación, o exposición de un nuevo método para estudiar las
lenguas, geografía, Cronología, historia, matemática, philosophia, política, etc.
(Cádiz, 1767) Don Juan Antonio Gonzalez.
9. Política Natural o Discursos sobre los verdaderos principios de Gobierno.
(Pamplona, 1787) escrita por un inglés y confutada por el P. Ricardo Richard.
18
Eduardo Ruíz Martínez. La librería de Nariño y los Derechos del Hombre. Bogotá: Ed. Planeta, 1990, págs. 218-
411. Presenta el listado de los libros incautados a Don Antonio Nariño y Álvarez en la diligencia de embargo de
bienes. Un total de 700 títulos 1881 volúmenes, cuyo inventario se realizó entre el 30 de agosto de 1794 y el 3
de septiembre de ese mismo año. Entre los textos citados aparecen algunos títulos que corresponden a una serie
de libros prohibidos que no formaron parte del primer inventario como el Espíritu de las Leyes de Montesquieu.
To ga d o s y L e t ra d o s
242
Aun cuando todas las bibliotecas que revisamos no son de juristas –es decir
letrados– como es el caso de D’Lhuyar o del virrey Solís o el mismo Manuel del
Socorro Rodríguez, se presentan para configurar un panorama de la circulación
material de libros y la existencia de una elite ilustrada que tenía posesión sobre
el saber y el orden social que este legitimaba.
Son diversas las inquietudes y las dificultades que surgen cuando se intenta
la reconstrucción de un corpus histórico sobre las obras escritas, sobre todo si
se tiene en cuenta que en principio todo listado resulta siempre incompleto.
Hay muchos elementos como la destrucción física de los libros, la pérdida, el
ocultamiento de los censores del Santo Oficio, el hurto y deterioro de los textos
que los sacaba de los mecanismos de conservación de las órdenes religiosas, de
las bibliotecas particulares y las de los centros de formación laicos y que además,
no permitía que los corpus materiales sean una fuente de referencia única para
confirmar la circulación de textos.
To ga d o s y L e t ra d o s
244
1
Lucien Febvre y Henrí-Jean Martin. La aparición del libro. México: FCE, Conacultura - Fonca, 2005, pág. 82.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
245
2
Alfonso García-Gallo. Metodología de la Historia del Derecho Indiano. Santiago de Chile: Editorial Jurídica de
Chile, 1971, págs. 26-119.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
247
Siglo XVIII4:
3
Cfr. con la obra de Águeda Rodríguez sobre las universidades hispanoamericanas, para tener una referencia más
completa del proceso de formación de dichas instituciones en la colonia neograndina.
4
Biblioteca de la Orden Franciscana. Universidad San Buenaventura, Bogotá. Datos del fondo antiguo sin
acceso público, obtenidos con autorización del Director de la Biblioteca Gabriel Rodríguez, 2008.
To ga d o s y L e t ra d o s
248
Valga anotar que la edición de Del Rey Fajardo presenta dos versiones
del inventario: una encabezada por autores y otra por el nombre de las obras
con un número para concordarlas. Para efectos de nuestro trabajo, hemos
respetado el orden alfabético para entresacar las obras que por su autor –en
los casos de aquellos muy conocidos– o bien por elementos de su título
que ofrecen indicios de su contenido jurídico. Entre las más significativas se
citan a continuación:
Ymbentario de la Biblioteca5
Años de 1766 a 67
(…)
5
José Del Rey Fajardo. La biblioteca Colonial de la Universidad Javeriana de Bogotá. Caracas. Las obras son citadas
conforme a la transcripción de esta edición y tomando el criterio de autor. No existe clasificación por materias,
de manera que aparecen títulos de obras de derecho civil y canónico, conjuntamente, aun cuando se prefirieron
títulos cercanos a la primera.
To ga d o s y L e t ra d o s
250
BALDO DEGLI UBALDI, Angel. Angelus de Perusio super prima (-secunda) parte
Digesti veteris… additis moviter quibusdam additionibus… (Varias ediciones y obras).
CABRERA, Juan de. Crisis Politica determina el mas florido Imperio, y la mejor
Institución de Principes, y Ministros.
HEVIA BOLAÑOS, Juan. Curia Philippica. Donde se trata de los juicios mayormente
forenses, eclesiasticos y seculares…
(…)6.
6
Inventario de la librería de la Universidad Javeriana citado de la edición de José del Rey Fajardo. La transcripción es
nuestra y se hizo respetando el texto original. Texto completo puede consultarse con Anexo al final de la investigación.
To ga d o s y L e t ra d o s
252
Las obras citadas no constituyen más del 10% del total del inventario, lo
que a nuestro modo está indicando una apuesta por títulos básicos. El hecho de
que algunas de ellas estén en latín, es un indicador de que en su gran mayoría
corresponden al periodo anterior al siglo XVI y sean copias de las ediciones
latinas originales, comentadas y glosadas. Se citan algunas obras que dejan ver la
preocupación por la oratoria y retórica como esenciales en el estilo forense, así
como instrumentos para intercambio epistolar y asuntos notariales.
7
Inventario de la librería de la Universidad Javeriana de 1767: Archivo General de la Nación. Fondo Colegios 38,
la transcripción es nuestra y se hizo respetando el texto original. Texto completo puede consultarse con Anexo
al final de la investigación.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
253
• Alvarez de Abreu, Antonio Joseph. Victima real legal, discurso unico juridico
historico politico sobre que las vacantes mayores y menores de las Iglesias de
las Indias Occidentales pertenecen a la Corona de Castilla y Leon con pleno
y absoluto dominio. Segunda edicion. Madrid, Andres Ortega, 1769.
• Álvarez, José María. Instituciones del Derecho Real de España. Tomo I.
Bogotá, Nicomedes Lora, 1836.
• Anónimo. Choix de rapports, opinions et discours prononcés à la Tribune
Nationale depuis 1789 jusque’à ce jour. Tomos 1, 20. Table générale. Paris,
Alexis Eymery et Corréard, 1818.
• Anónimo. Constitución política de la Monarquia española, promulgada
en Cadiz a 19 de marzo de 1812, Reimpresa en la Imprenta Nacional de
Madrid, 1820.
• Anónimo. Corpus Iuris Civilis Iustinianei (...) Tomus primus. Lugduni,
Sumptibus Horatii Cardon, 1612.
• Anónimo. Corpus Juris Civilis Romani. Tomus secundus. Coloniae
Munatianae. Sumptibus Fratrum Cramer, 1756.
• Anónimo. Digestum novum seu Pandectarum Iuris Civilis tomus tertius.
Lugduni, Sumptibus Horatii Cardon, 1612.
• Anónimo. Institutiones imperiales. Parisii, In Aedibus Yolandae Bonhomme,
1541.
• Anónimo. Las Leyes de Recopilación (Nueva Recopilación). Tres tomos.
Madrid, Pedro Marin / Imprenta Real de la Gazeta / D. Joachin Ibarra, 1772.
• Anónimo. Novisima recopilación de las leyes de España. Tomo VI. Madrid,
1807; otro ejemplar: Madrid, 1829.
• Anónimo. Recopilación de leyes de los Reynos de las Indias. Segunda edición.
Tomo tercero. Madrid, Antonio Balbas, 1756.
• Anónimo. Recopilación de leyes de los Reynos de las Indias.Tomo primero.
Madrid, Viuda de D. Joaquin de Ibarra, 1791; tomo tercero. Madrid, Julian
de Paredes, 1681.
• Anónimo. Reglamento y aranceles reales para el comercio libre de España a
Indias de 12. de octubre de 1778. Madrid, Pedro Marin, 1778.
8
Universidad Javeriana. Biblioteca Mario Valenzuela, S.J. Biblioteca de Filosofía y Teología Libros Antiguos y
valiosos. Lista de libros no catalogados. Citadas conforme al orden y descripción de la fuente.
To ga d o s y L e t ra d o s
254
• Encinas, Diego de. Cedulario Indiano. Ed. Alfonso Garcia Gallo, 4 tomos.
Repr. facsimil. Madrid, Cultura Hispanica, 1945.
• Faust von Aschaffenburg, Maximilianus. Consilia pro aerario civili,
ecclesiastico et militari publico atque privato, sive iurium artium ac
remediorum omnium, universi orbis terrarum... Francofurti, Sumptibus
Authoris, 1641 (Falta portada del tomo I).
• Febrero, Josef. Librería de escribanos, e instrucción jurídica teórico práctica
de principiantes. Parte segunda dividida en tres tomos. Tomo II. Madrid,
Pedro Marin, 1786.
• Frasso, Pedro. De regio patronatu Indiarum. 2 tomos. Matriti, Ex Typ. Blasii
Roman, 1775.
• Frasso, Pedro. Tractatus de regio patronatu ac aliis nonnullis regaliis regibus
catholicis in Indiarum occidentalium imperio pertinentibus. Matriti,
Gregorius Forman, 1677.
• Frasso, Pedro. Tractatus de Regio Patronatu Indiarum... Matriti, Gregorius
Fosman, 1677.
• Gambilioni, Angelo dei (Angelus Aretinus) Super Institutis. 1537.
• Godefroy, Denys [Gothofredus, Dionysius]. Corpus Juris civilis
Romani... Tomus primus. Coloniae Munatianae, Sumptibus Fratrum
Cramer, 1766.
• Gómez, Antonio. Variae resolutiones juris civilis, communis, et regii.
Editio novissima, 2 tomos en un vol. Lugduni, Sumptibus Petri Bruyset, &
Sociorum, 1761.
• Gómez, Antonio. Variarum resolutionum tomus tertius (Falta portada);
Ad leges Tauri commentarium absolutissimum. Editio nova. Lugduni,
Sumptibus Petri Bruyset, & Sociorum, 1761.
• Heinecke [Heineccius], Johann Gottlieb. Elementa Juris civilis secundum
ordinem Pandectarum. Tomus secundus. Venetiis, Ex typographia
Balleoniana, 1791.
• Heinecke [Heineccius], Johann Gottlieb. Elementa Juris Naturae et Gentium
castigationibus et catholicorum doctrina, et Juris historia aucta ab Joachimo
Marin et Mendoza. Matriti, Ex Officina Emman. Martini, 1776.
• Heinecke [Heineccius], Johann Gottlieb. Elementa Juris Naturae et
Gentium. Editio secunda Matritensis. Matriti, Sumptibus Placidi Barco
Lopez, 1789.
• Hermosilla, Gaspar / Hermosilla, Juan / Hermosilla Sebastián. Notae,
additiones ad glossas D. Gregorii Lopetii. Tomus primus. Lugduni, Ex
officina Anissoniana, 1675.
• Hevia Bolaños, Juan de. Curia Filípica, primero y segundo tomo... Madrid,
Imprenta de la Real Compañía, 1825.
To ga d o s y L e t ra d o s
256
LEGISTAS10
• ABENDAÑO (Pedro) Respon. y de exeq. 2 tom. fol perg.o Salamanca 1569 no. 4.
• ANGULO (Andrés) de Meliorat 1 tomo 4 perg.o en Madrid 1592 no. 1.
9
Zudaire. Op. cit., pág. 136.
10
Inventario de la edición manuscrita de la Real Biblioteca de Santafé, elaborado por Manuel del Socorro
Rodríguez, 1790, cuando fue nombrado como bibliotecario de la misma. La transcripción es nuestra
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
259
y se ha hecho respetando la original. Biblioteca Nacional de Colombia. Bogotá, 2008. citamos los apartes
correspondientes a Legistas y Canonistas, citando el número de folio del manuscrito. Existen dos ediciones de
este inventario: la primera es del año de 1776 y la segunda de 1790 que es desde donde tomamos la cita.
To ga d o s y L e t ra d o s
260
• HERMOSILLA (Gaspar) leyes de partida. 2 tom fol. perg.o, en Baeza 1634 no. 2.
• YNSTITUTA, de Justiniano. 1 tomo 8 perg.o, sin lugar, ni año no. 5.
• JASON, su obra. 7 tomos folio perg.o en Leon, en 1560 no. 5.
• JUSTINIANO (Bernardo) de Cambios 1 tomo 4 papel, sin lugar, ni año no. 2.
• LEON (Antonio) Prag. de tapadas. 1 tomo 4 perg.o en Madrid, en 1641 no. 2.
• MATIENZO ( Juan de) Sobre el 5º de la recopil. 1 tom fol. perg. en Madrid 1 613
no. 5.
• MATHEU (Lorenzo) de Ree Crimen. 1 tom. fol perg.o en Leon, en 1676 no. 1.
• MALGAREJO (Pedro) Practica 1 tomo 4 perg.o en Madrid, en 1689 no. 2.
• MENOQUIO ( Juan) su obra. 14 tom y quado. Fol. perg. en Francfort 1605 no. 4.
• PAREJA (Gabriel) de Ynstrum 1 tom fol. perg. en Leon 1668 no. 4.
• PICHARDO (Antonio) Su obra 2 tom fol, perg. en Genova, en 1657 no. 1.
• GUEES ( Juan Jorge) Yn Ynstitutum . 1 tom 4 vec. en Lausana, 1765 no. 2.
• REBARDO ( Jacovo) de usucap. 1 tom 8 perg. en Antuerpia, en 1561 no. 1.
• RIPIA ( Juan) de rentas reales. 1 tom fol perg. en Madrid, en 1676 no. 4.
• ROXAS ( Juan) de Sucesion. 1 tomo fol. pergo. en Salamanca 1581 no. 5.
• SALGADO (Fran.co) su obra 5 tom. fol. pergo. en Leon, en 1665 no. 5.
• SALON DE PAZ (Marcos) Concil. y leyes de Toro2 tom. fol. perg. Valladolid. 1568
no. 1 y 4.
• SALON (Diego) Quest. Civ. 1 tom 8 perg. en Medina, en 1576 no. 3.
• SALZEDO (Pedro) de Leg. Pol. y examen. 3 tomos fol. perg. en Madrid 1678 no. 2.
• SOLORZANO (D. Juan) Sus obras 5 tom fol. perg. en Madrid, en 1647 no. 3.
• TIRAQUELO (Andres) 3 tom. fol. vec.a y 1 en 8 perg. en Francfort 1614 no. 5.
• VALENZUELA ( Juan) Concilia 1 tomo fol. perg. en Napoles, en 1618 no. 3.
• VELA ( Juan) de Poenis. 1 tom 4 perg. en Salamanca en 1603 no. 2.
• VILLAROEL (Diego) Practica 1 tomo 4 perg. en Madrid, en 1661 no. 1.
• VIGLIO. Ynstituta en latín, y griego 2 tom. 8 perg. en Leon, en 1584 no. 2 y 5.
• VINIO (Arnoldo) Ynstituta, y particiones 4 tom. 4 perg. en Venecia 1 625 no. 4.
CANONISTAS
POLÍTICOS
• ALBORNOZ (dr. Diego) Cartilla política. 2 tomos 8 perg. en Madrid, en 1665 no. 9.
• BELARMINO (Roberto) de Oficiis principis. 1 tomo 8 perg. en Colonia, en 1619
no. 9.
• BRADO (d. Marcos) Espejo de la juventud. 1 tomo folio perg. en Madrid, en 1674
no. 9.
• CERBANTES (Miguel de) Vida de Dn. Quixote. 2 tomos 4 perg. en Madrid, en
1741 no. 9.
• FEYJOO (Sr. Benito Jerónimo) Vide vidas (sin más datos).
• GONGORA (Luis de) Soledades por salzedo. 1 tomo 4 perg. sin lugar, ni año no. 9.
• GUEVARA (dn. Antonio) Sobre Marco Aurelio, 1 tomo 4 perg. en Madrid, en
1651 no. 9.
• _______. Menosprecio de Corte, y alabanza de Aldea. 1 tomo 8. vit. En Milan, en
1752 no. 9.
• MENOQUIO ( Juan) estudios Eruditos. 1 tomo 8º perg. en Madrid, 1735 no. 9.
• MORALES de Plutarco. 1 tomo 8º. Pergamino, en Leon, en 1551 no. 9.
• POSEVINO (Antonio) contra maquiabelo. 1 tomo 8º. Perg. en Leon, en 1593 no. 9.
• PUFFENDORFF (Varon de) Introducción a la historia general, y politica. 7 tomos
8º. Mayor papel, en Amsterdan, en 1732 no. 9.
• QUEVEDO (dn. Francisco de) sus Obras. 5 tom 4 perg. en Madrid, en 1656 no. 9.
• Republica, y Politica Cristiana 1 tomo, 8 perg. sin lugar, ni año, no. 9.
• RICHELIEU (el cardenal de) Testamento politico 1 tomo, 8 vec. En Amsterdan
1708, no. 9.
• SAAVEDRA (dn. Diego) Empresas politicas 2 tomos 4 el uno en Amsterdan, en
1655, y el otro en Valencia, en 1660 no. 9.
• SERRE el secretario á la moda. 1 tomo 12 perg. en Ruan, en 1685 no. 9.
• TORRES ( Juan) Filosofia Moral de Principes. 1 tomo folio pergamino, en Burgos,
en 1602 no. 9.
• VIECIO (Nicolas) de Republica 1 tomo 4 perg. en Antuerpia, en 1556 no. 9.
• UGARTE (Dn. Francisco) Origen de los goviernos. 1 tomo 4 perg. en Madrid 1
655 no. 9.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
263
POLÍTICA
• SOLORZANO PEREIRA, JUAN DE- Política indiana. Descubrimiento,
descripción, adquisición y gobierno, etc. Madrid, imp. Real de la Gazeta, 1776,
vols. 2, págs. 438 y 654.
DERECHO CONSTITUCIONAL
• TOBAR VALDERRAMA, DIEGO DE- Instituciones políticas: al Principe de las
Españas y Nuevo Mundo. Madrid, imp. Catalina de Barrio, 1645, vol.I, págs. 207.
DERECHO ADMINISTRATIVO
• AVENDAÑO, I.C., PETRUS NUNIUS DE- De exequendis mandatos Regué
Hispaniae. Salmanticae, imp. Io. de Canova, 1554, vol.I, págs. 146 y 32.
• BALLESTEROS, TOMÁS DE- Tomo primero de las ordenanzas del Perú
por don Melchor de Navarra, y de la Bula de Benedicto XIV estableciendo
el tribunal de la Santa Cruzada. Lima, imp. Fco. Sobrino, 1752, vol.I, págs.
339.
DERECHO PENAL
• FARINACIUS, I.C. PROSPERUS- Opera omnia, Praxis criminalis, L. s. Decis.
S. Rotae, etc. Duaca et Lugduni, imp. Wyon, Cardon, Keerbergii ( Antuerpiae),
1616/20, vols. 14.
• GUTIÈRREZ, IOANNES- Praxis criminalis, civiles et canonica. Salmanticae,
imp. Didaci Cursii, 1632, vol.I, págs. 436.
• LÓPEZ DE CUÉLLAR Y VEGA, JUAN- Tratado jurídico, político, practico de
indultos. Pamplona, 1690, vol.I, págs. 312.
11
Transcripción del Catálogo General de libros del fondo antiguo de la Biblioteca Colegio Mayor de Nuestra
Señora del Rosario, Bogotá, 2009. El catálogo corresponde a un trabajo de clasificación moderna elaborada
por la universidad y para este estudio se toma con las divisiones que ellos tienen para textos tanto de derecho
canónico como de derecho civil, por áreas.
To ga d o s y L e t ra d o s
264
DERECHO CIVIL
• ACEBEDO, ALPHONSUS DE- Opera, commentarii iuris civiles in regias
constitutiones, tomo I a IV. Lugduni, imp.Fratres de Vile, 1737, vols.2, págs.
775 y 946.
• ALFONSO, EL REY DON- Las siete Partidas, reimpresas por el tenor de la
edición de Salamanca del año de 1555, por D. Joseph Berni y catalá; glosadas
por D. Gregorio López. Valencia, imp. Benito Monfort, 1767, vols. 3. Ed. De
Benito Monfort.
• BEATIUS, GASPAR- Opera Omia. De non meliorandis ratione dotis filiabas,
de Inope debitore, creditori addicendo, et de Decima tutori Hispanico iure
paestanda. Madritii, imp. Ludovico Sánchez, 1592, vol.I, págs. 307. Ed.
Impensis Francisci de Robles.
• BALDUS, UBALDUS PERUSINUS- In I/V Libros Codiis, adnotationibus
Alexandri imolensis, Andreae Barbatiae, Celso Phillippi, Decii, etc. Venetiis,
imp. Iac.Iuntae, 1572, vol,I, págs. 274 y 245.
• BARTOLUS DE SAXOFERRATO- Commentaria in primam Infortiati partem
D. Petri Pauli Cardinales additionibus illustrata. Lugduni, imp. Thomas Bertelli,
1547.vol.I, págs. 202.
• CALDAS PEREYRA ET CASTRO, FRANCISCUS- De universo Iure
Enphyteutico. Francofurti, imp. Zachartiae Paltheanii, 1612, vol.i, págs. 978.
• CARLEVALIUS, THOMAS- Disputationes Juris variae ad interpretationem
legum regiarum Regni Castellae. Matriti, imp. Regis, 1656, vol.I, págs. 428 y
323. ed. tertia.
• COVARRUBIAS A LEYVA, DIDACUS- Variarum ex jure pontificio et Caesareo
resolutions libri quator, et practicarum questionum liber unus. Granatae, 1552,
vol.I, págs. 593.
• DIAZ DE MONTALVO, ALFONSUS- Commentus super Foro regali (Fuero
real de España), 1543, vol.I, págs. 263.
• Epitomes, D. Justiniano Instituciones. Santae Fidei (manuscrito), 1767, vol. I,
págs. 82 y 13.
• FLOREZ DIAZ DE MENA, BLASISUS- Lucubraciones in decisiones in
supremo Lusitaniae FENATU olim decretas et per Ant. A Gamma digestas.
Vallisoleti, imp. Joann. De Milis, 1599, vol.I, págs. 68 y 46. Expensas martín de
Cordova.
• GIBALINUS, S.J., JOSEPHUS. De universa rerum humanarum.
• HEINECCIUS, I.C. Io. GOTTL- Instiuttionum Imperialium Commentarius.
Lugduni, imp. Petri Bruyset, 1775, vols.”, págs. 568 y 1192. Ed novissima.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
265
DERECHO PROBATORIO
• CAVALCANUS, I.C. HORTENSIUS- Practica et theorica de Testibus. Mantuae,
imp. Francisci Osannae, 1604, vols.I, págs. 313.
DERECHO PROCESAL
• BOBADILLA, CASTILLO DE- Politica para Corregidores y señores de vasallos,
para prelados, y de lo tocante a las Ordenes y Caballeros de ellas. Madrid, imp. Real,
1775, vol.I, págs. 940. Tomo Io.
• MARTÍNEZ, MANUEL SILVESTRE- Librería de jueces; para alcaldes, corregidores,
jueces, etc., tomo IV. Madrid, imp. Blas Román, 1774, vol. I, págs. 412.
Archivo de la Provincia de San Luis Bertrán de Colombia. Padres Dominicos. Bogotá. Citado de la colección
12
privada con autorización de Fray José Gabriel Mesa Angulo O. P. 2009. Cita conforme a la fuente.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
267
Muy a pesar de la labor que llevaron a cabo los funcionarios que levantaron
los inventarios de los bienes (entre los cuales figuran las bibliotecas) que hoy
nos permiten apreciar los libros de circularon materialmente en el periodo
colonial, es un hecho evidente que dichos inventarios adolecen de precisión
en cuanto autores, títulos y datos de edición, y por la generalidad de la
información que transcribían, en muchos casos deja por fuera de algunos
análisis, la posibilidad de establecer con certeza el número real de textos que
eran leídos, los que circulaban y los que se ponían a disposicíon del público en
las bibliotecas abiertas.
En el estudio que elaboran Del Rey Fajardo y González Mora sobre los
jesuitas en Antioquia entre 1727 y 1767, se anota como en el caso de la revisión
de las bibliotecas y en general de los textos propios producidos por miembros
de esa Orden, no existe la certeza sobre la rigurosidad de dichos inventarios.
En el caso particular de los jesuitas es claro que ellos permitieron la circulación
de obras que no eran de conocimiento en otros lugares del virreinato, de allí las
siguientes observaciones:
Los maestros llevaban consigo los libros que les permitieran enseñar la Ratio
Studiorum (gramática: ínfima, media, y suprema en tres años; humanidades:
en el cuarto año; y retórica: en el quinto año) y en muchos casos no existían
suficientes maestros para llevar a cabo ese proyecto. Los pocos disponibles no
tenían una buena biblioteca. Ellos optaban, como los juristas santafereños, por
la elaboración de mamotretos:
José del Rey Fajardo S.J, y Felipe González Mora. Los jesuitas en Antioquia 1727-1767. Aportes a la historia de la
13
14
Ibíd., pág. 87.
Capítulo 12
A partir de los los títulos que conforman el corpus material de las obras que
se tomaron de los archivos, de las bibliotecas y de las referencias bibliográficas,
que circularon en el periodo, bien como primeras ediciones, o como reediciones
de textos clásicos y que consideramos esenciales para la formación de los juristas
en la Nueva Granada, hemos propuesto los siguientes textos:
Fuente: Inventario bajo el título de Legistas Real Biblioteca de Santafé. 1790. Biblioteca Nacional de Colombia.
Elaborado por la autora.
Ese mismo ejercicio tendría que hacerse de los otros inventarios, sin embargo,
en ellos no fue posible tener el dato sobre número de tomos o volúmenes por
tomo. Igualmente, habría que separar los títulos publicados en cada siglo entre
To ga d o s y L e t ra d o s
276
Fuente: Datos parciales de las bibliotecas inventariadas en el capítulo 11. Elaborado por la autora.
1
Son esenciales los trabajos referidos a los fondos notariales como fuente para la ubicación de textos o bibliotecas
completas, porque en su mayoría ellos quedaban registrados en los inventarios de bienes o testamentarias de
los juristas. Cfr. Manuel Pedraza. La documentación notarial: fuente para la investigación de la historia del libro, la
lectura y los depósitos documentales.
Conclusiones
Los textos del corpus material, que se pudo reconstruir en este ejercicio,
dan cuenta de las obras de todo el periodo colonial. En relación a la segunda
parte del siglo XVIII (en el periodo 1739-1777) se puede verificar que las
obras corresponden a una línea discursiva de tono clerical, dominante y de una
visión secular, que sin embargo está apuntalada en el regalismo. Es necesaria
una aproximación hacia las obras heterodoxas para determinar cuáles tuvieron
la posibilidad de nutrir un pensamiento revolucionario en los movimientos
de independencia, y qué papel jugaron los textos jurídicos y los estudiantes de
derecho, por fuera de las elites familiares que ejercían el control burocrático en
la colonia. La presunción de abogados revolucionarios como abogados letrados
requiere una mayor y más detenida revisión.
Es necesario construir una red de conexiones entre las obras que circulaban
en la colonia (siglo XVI, hasta final del siglo XVIII), para proponer corrientes
y paradigmas que fueron sustento del derecho republicano y verificar sus
distancias y sus puntos de encuentro. Pero muy importante será intentar llegar
a las colecciones privadas de juristas en la colonia neogranadina y reconstruir
el corpus de los mamotretos que construían, desde sus lecturas y conjeturas, que
se convertían en fuente doctrinal sobre la profesión en virtud a las prácticas en
el foro, en los tribunales, en los colegios y en la incipiente jurisprudencia de las
Reales Audiencias.
importancia después del Rosario, pero de acuerdo con la consulta actual de los
archivos de la orden, lo mismo que la de los franciscanos, no se registra un
número considerable de títulos jurídicos.
Como hemos insistido desde el comienzo de este texto, este trabajo es una
aproximación, que requiere estudios nuevos y en profundidad, sobre los procesos
de recepción de ciertas obras –bien las consideradas canónicas por autores,
tratadistas modernos o bien como consecuencia de una indagación sobre las
lecturas que efectivamente se hicieron en la época– y que aportaron elementos
intelectuales y culturales a la formación de derecho colombiano, en la colonia,
en la república. Se trata de llamar la atención sobre un campo disciplinar que
bien podemos nombrar “Cultura del libro jurídico en la formación del Derecho
colombiano” y registrar las diversas etapas histórico-sociológicas, para su estudio.
Bibliografía
uentes Primarias
Fuentes Secundarias
(Fol. 3)
Ymbentario de la Biblioteca1
Años de 1766 a 67./
(…)
1
José Del Rey Fajardo. La biblioteca Colonial de la Universidad Javeriana de Bogotá. Caracas. Las obras son citadas
conforme a la transcripción de esta edición y tomando el criterio de autor. No existe clasificación por materias,
de manera que aparecen títulos de obras de derecho civil y canónico, conjuntamente, aun cuando se prefirieron
títulos cercanos a la primera.
To ga d o s y L e t ra d o s
300
BOTERO, Juan. Descripcion de todas las prouincias y reynos del Mundo, 1438BRANT,
Sebastián. Titulorum omnium iuris tan civiles quam canonici exposiciones, 0847.
BRAUN, Jorge. Civitates orbis terrarum, 1572-1618, 1436.
BRAVO DE LA SERNA, Marcos. Espejo de la juventud, moral, politico y christiano,
1422.
CABASSUT (CABASUCIO) Juan. Iuris canonici Teoría et Praxis 0892.
CABRERA, Juan de. Crisis Politica determina el mas florido Imperio, y la mejor
Institución de Principes, y Ministros, 1443.
CAMPANILI, Juan Jerónimo. Diuersorium iuris canonici vniuersum clericorum ac
regularium statum… 0876.
CARLEVAL, Tomás. D.D. Thomae Carlevalii… Disputationes iuris variae ad
interpretationem regiarum legum Regni Castellae… de iudicis, 0878.
CASTEJON, Egidio de. Alphabetum Juridicum Canonicum, Civile theoricum practicum,
Morale atque Politicum, 0879.
CASTILLO DE BOBADILLA, Jerónimo. Política para corregidores y señores de vasallos
en tiempo de paz y de guerra, 0872.
CAVAGNOLIUS, Rolando. Observationum legalium et iuridicarum ad Responsa I.V.D.
celeberrimi Iacobi Menochij, 0994c.
CIRON, Inocencio. Innocentii Cironii opera in jus canonicum, 0895.
CORAS, Juan. Joannis Corráis… Miscellaneorum Juris Civiles, 0903.
CORPUS IURIS CIVILIS. Codex. Cidicis Ivstiniani, 0904 a.
CORPUS IURIS CIVILIS. Digesta. Digestorvm sev Pandectarvm libri
qvinqvaginta,0904c.
CORPUS IURIS CIVILIS. Edicta. Ivstiniani Imperatoris edicta, 0904d.
CORPUS IURIS CIVILIS. Instituciones. Instituciones imperiales, 0904b.
CORPUS IURIS CIVILIS. Novellae. Nouellarum Constitutionum post repetitam Codicis
praelectionem editarum liber 0904e.
COROY, Simón de. Pandectae novae legis, 0048.
COVARRUBIAS Y LEYVA, Diego. Practicarvm qvaestionvm liber vnvs, 0897b.
COVARRUBIAS Y LEYVA, Diego. Variarum ex Pontificio, Regio, & Caesareo Jure
Resolutionum libros IV, 0897c.
CURCIO, Jacobo. Theophili Paraphrases graeca in Ivris Ciuilis Instituciones Cum latina
Iacobi Curtii interpretatione… 0905.
CHOKIER, Erasmo. Erasmo à Chokier… Tractatus absolutissimus de iuridictione
ordinarii in exemptos… tomus tertius…0899ª.
CHOKIER, Erasmo. Erasmo à Chokier… Tractatus absolutissimus de iuridictione
ordinarii in exemptos… 0899b.
CHOKIER, Erasmo. Erasmo à Chokier… Tractatus absolutissimus de iuridictione
ordinarii in exemptos… deque illorum exemptione ab ordinaria iurisdictione, 0899c.
DAOYZ, Esteban. Index Juris Pontificii, 0920.
DAVILA Y HEREDIA, Andrés. Arte de medir tierras, 1134.
To ga d o s y L e t ra d o s
302
TORRES, Juan de. Philosophia moral de Principes para su buena crianza y gobierno,
2021.
UBALDI, Baldo degli. Balde Ubaldi…In Digestum Novum commentaria, 0866a.
UBALDI, Baldo degli. Balde Ubaldi… In primam et secundam Infortiati partem
commentaria, 0866b.
UBALDI, Baldo degli. Balde Ubaldi… in quartum et quintum Cod. Lib. Commentaira,
0866e.
UBALDI, Baldo degli. Balde Ubaldi… in sextum Codicis librum commentaria, 0866f.
UBALDI, Baldo degli. Balde Ubaldi… In VII, VIII, IX, X et XI Codicis libros
commentaria, 0866c.
UBALDI, Baldo degli. Balde Ubaldo… In primum, secundum et tertium Cod. lib.,
0866d.
UBALDI, Baldo degli. Index Iucupletissimus rerum omnium ac sentenciarum
memorabilium quae in Balde Ubaldi commentarii ad libros Digestorum Codicis et
Institutionum, nec non in tract. De pactis, et constituto continentur… 0866h.
VEITIA LINAGE, José. Norte de contratación de las Indias Occidentales, 1022.
VELA, José. D.D. Josephi Vela de Oreña… Dissertationum juris controversi tam in
Hispalense quam Granatensi senatu super materias tam eclesiásticas quam civiles,
1091.
VELAZQUEZ DE AZEVEDO, Juan. Fénix de Minerva, y Arte de memoria, que enseña
sin maestro a aprender y retener, 1380.
VILLALOBOS, Juan Bautista. Antonomia Juris Regni Hispaniarum, & Civiles, 1102.
VINNEN (VINNIUS), Arnoldo. Arnoldo Vinnii. Jurisprudentia sive partitionum juris
civiles libri quarttuor, 0871.
XIMENEZ, Sebastián. Concordantiae utrisque –Juris Civiles & canoni –legibus
Partitarium, 1110.
(…)
Anexo 2
LEGISTAS
Folio 65 V LEGISTAS A2
ABENDAÑO (Pedro) Respon. y de exeq. 2 tom. fol perg.o Salamanca 1569 no. 4.
AYALA (Baltasar) de Discip. Mili tom. 8 perg.o en Lobayna 1648 no. 1.
AILLON ( Juan) At Gomez. 1 tomo fol. perg. en Leon, en 1678.
AIORA (Antonio) de partir. 1 tomo fol. Perg.o en Madrid, en 1584 no. 4.
AFLICTIS (Mateo) Decis. 2 tomos 8 perg.o en Leon en 1552 no. 2 dup.do no. 1.
ALCIATO (Andrés) Sus obras 4 tom. fol. Vitela, en Basilea, en 1582 no. 1.
ALEXANDRO CONCILIA. 3 tom. fol. perg.o en Venecia, en 1590 no. 1.
ALEGACIONES. 39. tom. fol. perg.o impreso, y manuscrito, abajo.
ALLETA (Francisco) verdad defendida 1 tom. fol. perg.o no. 4.
AMATO (Antonio) Resolut. Var. 2 tom. fol. perg. en Parma, en 1634 no. 1.
ANDREUSI (Andrés) de Fuenda Pace, 1 tom. 4 perg.o en Roma, 1737 no. 4.
ANGELO (Aretino) Su obra. 1 tom. fol. perg.o en Augusta, en 1580 no. 2.
2
Inventario de la edición manuscrita de la Real Biblioteca de Santafé, elaborado por Manuel del Socorro
Rodríguez, como bibliotecario de la misma. La transcripción es nuestra y se ha hecho respetando la original.
Biblioteca Nacional de Colombia. Bogotá, 2008. citamos los apartes correspondientes a Legista y Canonista
citando el número de folio del manuscrito.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
307
Folio 66 R. LEGISTAS B.
BAEZA (Gaspar) su obra. 1 tomo fol. perg.o en Madrid en 1592 no. 1.
BALDO. Su obra 10 tom. fol. y 1 en 8 perg.o en Leon en 1541 no. 3 y 5.
BALMASEDA (Diego) de Colectis 1 tomo fol. perg.o en Madrid en 1683 no. 4.
BARBOSA (Pedro) Su obra 6 tom.fol pergamino, en Colonia, en 1737 no. 1.
YDEM, Soluto matrimonio. 1 tomo fol. perg.o en Madrid en 1595 no. 3.
BARTOLO, Su obra. 10 tom. fol. perg. en Leon, en 1567 no. 4 y 5.
BERTAQUINO ( Juan) Repertorio 4 tom. fol. perg.o en Leon 1546 no. 2.
BOVADILLA (Castillo) Politica 2 tom. fol. perg. en Barcelona.
BATANDIER (Claudio) praxis crim. 1 tom. 8 perg.o en Venecia, en 1567 no. 5.
BOLAÑOS ( Juan) Curia Philipica 1 tom. fol. perg.o en Madrid en 1657 no. 3.
BOHERIO (Nicolas) Decisiones 2 tom. 8 perg. En Leon en 1547 no. 5.
BONACOSA (Ipolito) Opiniones 1 tom 8 perg.o en Francfort en 1576 no. 4.
BORCHOLTEN ( Juan) In Instit. 2 tomos 4 perg. En Leon 1661 no. 4.
BORRELO (Camilo) Decis 1 tom. fol. perg.o en Venecia en 1672 no. 1.
BRANT (Sebastián) exposit. Titul. 1 tom. 8 perg.o en Leon en 1581 no. 1.
BRISONIO (Bernabé) Formulas 1 tom. fol. perg.o en 1583 no. 1.
Folio 66 V LEGISTAS C
CABALINO (Gaspar) de Evition 1 tom. 8 perg.o Venecia, en 1573 no. 1.
CALVO (Bernardino) Suma de fueros. 1 tom. 8 perg.o Zaragoza, 1589 no. 2.
CALDERON (Bartolome) Manual. 1 tom. 8 perg.o en Cadiz en 1598 no. 1.
CANTERA (Diego) Queso. Crim. 1 tom. fol. perg.o en Salamanca 1589 no. 2.
CANCERIO ( Jacovo) Var. Resol. 2 tom. fol. perg.o en Leon en 1644 no. 3.
CARRASCO (Fran.co) Su obra. 2 tom. fol. perg.o en Sevilla en 1620 no. 1.
CORRADO (Pirro) Praxis benefi. Y de dispen. 2 tom. fol. perg.o en Venecia
1671 no. 5.
CARLEVAL (Tomas) de Judicis 1 tom. fol. perg.o en Madrid, en 1656 no. 5.
CARTARIO (Flaminio) Decis 1 tom. 4 perg.o en Francfort en 1608 no. 5.
To ga d o s y L e t ra d o s
308
Folio 67 R LEGISTAS D
DAZA (Bernardino) Instituta 1 tomo 8 pergo. en Madrid, en 1722 no. 1.
DECIO (Phelipe) de Regul. Jur. 2 tom. 8 rec. A y perg.o en Leon, en 1546 no.
1 y 5.
YDEM Concilia et in decret. 4 tom. fol. perg.o en Augusta, en 1579 no. 2 y abajo.
DIAZ (Bernardo) 2 tom. 8 perg. en Leon, en 1561 no. 2.
DINO Concil. Y de regul. 2 tom 8 pergamino, en Leon en 1552 no. 1 y 4.
DONELO ENUCLEADO. 8 tom. fol. perg.o en Antuerpia en 1642, no. 1.
DUARENO (Fran.co) tomo fol. y 1 en 8 perg.o en Francfort, en 1607 no. 5.
DURANDO (Guillermo) Speculum 1 tom. 4 perg. en León, en 1538 no. 3.
Folio 67 V LEGISTAS E
ESCAÑO (Fernando) de Testam 1 tomo fol. perg.o en Sevilla, en 1673 no. 4.
ESCOVAR ( Juan) de Novilitare 1 tom. fol. perg.o en Madrid, en 1632 no. 1.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
309
Folio 68 R LEGISTAS F
FABRO (Geronimo) de Protonot. 1 tom. 4 perg.o en Bolonia, en 1672 no. 2.
FABRO (Antonio) Decisiones de Savoya. 2 tom. fol. perg.o en Leon 1610 no. 1.
YDEM 8 tom. fol., y 5 en 4 perg.o en Colonia, en 1628 no. 2 y 3.
FARINACIO (Prospero) Su obra 18 tom. fol. perg. en Leon, en 1634 no. 2.
FERRA ( Juan) Practica papiense 1 tom. 4 perg.o en Leon en 1537 no. 3.
FOLERIO (Pedro) de Censos 1 tom. 4 perg.o sin lugar, ni año no. 2.
FUSARIO (Vizente) de Sustituciones 1 tom. fol. perg. en 1641 no. 1.
FRANQUIS (Vizente) Decis 1 tom. fol. perg.o en Augusta, en 1610 no. 5.
FRASO (D. Pedro) de Regio patronato 2 tom. fol. perg. Madrid, en 1679 no. 4.
Folio 68 V LEGISTAS G
GAITO ( Juan) de Credito 1 tom. fol. perg.o en Venecia en 1641 no. 3.
GARCIA ( Juan) de Novilitate 1 tom. fol. perg.o en Valladolid, en 1588 no. 2.
YDEM, de Spesis 1 tom. 4 perg. en Marpurgo en 1614 no. 2.
GENUENSE (Marco Antonio) de Eclesia 1 tom., 4 perg. en Leon, en 1622 no. 2.
GENUA (Nicolas) de Scritura privata. 1 tom. 4 perg.o sin lugar, ni año no. 3.
GIGANTE (Antonio) de Pensiones. 1 tomo 8 perg.o en Leon, en 1572 no. 2.
GIRONDA (Garcia) de Privilegios 1 tom. fol. perg.o en Madrid 1617 no. 4.
GIURRA (Maria) Decisiones 2 tom. fol. perg. en Genova, en 1645 no. 1.
GOMEZ ARIAS (Fern.do) Sobre las leyes de Toro. 1 tom. fol. perg.o sin lugar,
no. 1.
GOMEZ (Luis) Reglas de Carceleria. 1 tom. 8 perg.o en Leon, en 1575 no. 2.
GOMEZ (Antonio) Resol. var. y Leyes de Toro. 4 tom. fol. perg.o dup.da los dos
tom en Colonia, en 1622, y los otros en Antuerpia, en 1613 no. 3.
GONZALEZ (Geronimo) in reg. Cancel. 2 tom. fol. perg.o y rec.a. Roma 1615
no. 1 y 3.
GUACINO (Sebastián) Defensa de reos: 1 vol. fol. perg.o en Leon 1672 no. 1.
GUTIERREZ ( Juan) Su obra 11 tom. fol. perg.o en Salamanca 1617 no. 2.
GUIDO (Papa) Decisiones 1 tom 4 perg.o en Leon, en 1593 no. 2.
GUZMAN (Geronimo) Nove Veritatis. 1 tom fol. perg.o Madrid, 1665 no. 4.
GRACIANO (Estevan) Decis 1 tom. 4 perg.o en Colonia, en 1622 no. 3.
GRAMATICO (Tomas) Concilia. 1 tom. 8 perg.o en Leon, en 1541 no. 3.
GRIVALDO (Mateo) Modo de estudiar 1 tom. 8 perg.o en Leon, en 1541 no. 3.
To ga d o s y L e t ra d o s
310
Folio 69 R LEGISTAS H
HERCULANO (Fran.co) de caucione. 1 tomo 8 perg.o en Venecia, en 1571 no. 3.
HERMOSILLA (Gaspar) leyes de partida. 2 tom fol. perg.o, en Baeza 1634 no. 2.
HERINGIO ( Juan) de Molinos (?) 1 tom. 4 perg.o en Francfort, en 1663 no. 2.
HESABIBLOS (Prochiron) 1 tomo 8 pergo. Sin lugar, ni año no. 1.
HIPOLITO 1 tomo folio mayor, en Leon, en 1542, abajo.
Folio 69 V LEGISTAS Y
YNSTITUTA, de Justiniano. 1 tomo 8 perg.o, sin lugar, ni año no. 5.
YDEM, de Theofilo. 1 tomo 12 perg.o en Leon, en 1581 no. 1.
Folio 70 R LEGISTAS J
JASON, su obra. 7 tomos folio perg.o en Leon, en 1560 no. 5.
JUSTINIANO (Bernardo) de Cambios 1 tomo 4 papel, sin lugar, ni año no. 2.
JUICIO IMPARCIAL 1 tom. fol. papel, en Madrid, en 1768, no. 5.
Folio 70 V LEGISTAS L
LANCELOTO (Paulo) Ynstituta 1 tomo 12 perg.o en Leon, en 1614 no. 4.
LARREA ( Juan) Alegat. Fiscal. 1 tomo fol. perg.o en 1732 Leon, no. 3.
LASARTE (Ygnacio) de Alcavalas 1 tom. fol. perg. en Madrid 1599 no. 4.
LEON (Gomez) Información 1 tom. fol. perg. en Sevilla en 1564 no. 2.
LEON (Antonio) Prag. de tapadas. 1 tomo 4 perg.o en Madrid, en 1641 no. 2.
LOPEZ (Bula de la Cena, con Ledesma) 1 tomo fol. perg.o en Madrid, 1768
no. 5.
LEYES DE PARTIDA POR MONTALVO, 2 tom. fol. badana, sin lugar no. 1.
YDEM, por Gregorio Lopez, 5 tom. fol. perg.o en Valladolid, 1587, no. 1.
YDEM, por Berni, 4 tomos fol. vecerra, en Valencia, en 1767 no. 2.
YDEM, de recopilación de Castilla. 3 tomos fol. perg.o en Alcalá 1569 no. 4.
YDEM, con el cuaderno de añadidas. 4 tom. fol. perg.o Madrid 1640 no. 4.
YDEM, de Indias. 4 tomos fol. perg.o en Madrid, en 1681 no. 4.
Folio 71 R LEGISTAS M
MANTUA (Marcos) Singularia 1 tomo fol. perg.o en Leon, en 1570 no. 5.
MANTICA (Fran.co) de Congerutis 1 tomo fol. perg.o en Venecia 1587 y 1
tomo folio perg.o de Tacitis, en Roma, en 1609 no. 5.
MARANTA (Roverto) de ordine judit. 1 tomo 4 perg.o no. 4.
MANDOCIO (Quintiliano) Sobre las reglas de cancel.1 tom. f. perg.o sin lug.
(a) no. 1.
MARESCOTO (Ercules) Resolu. Var. 1 tomo fol. perg.o sin lugar, ni año
no. 1.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
311
Folio 71 V LEGISTAS N
NARBONA (Alfonso) orograf. Et in recopil. 2 tom. fol. perg.o en Toledo 1624
no. 5.
NAVARRO ( Juan) de Vectigal. 1 tomo 4 perg.o en Valencia, en 1587 no. 1.
NOALIS (Nicolas) de transmisión. 1 tomo 4 perg.o en Franfort 1626 no. 3
NOGUEROL (Pedro) Alegaciones 1 tom. fol. perg.o en Madrid, en 1656 no. 5.
NIGRO (Antonio) de laudemio 2 tom. fol. perg.o en Roma, en 1650 no. 1.
Folio 72 R LEGISTAS O
OLDRADO (Concilia) 1 tom. fol. perg. en Leon, en 1543 no. 5.
OLEA (Alfonso) con addicion. 2 tom. fol. perg.o en Madrid, en 1682 no. 2.
OTALORA ( Juan) de Nobilitare 1 tomo fol. perg.o en Salamanca, en 1559 no. 4.
OTERO (Antonio) de Pascuis 1 tomo fol. perg.o en Valladolid, en 1632 no. 2.
OROZ ( Jerónimo) 1 tomo fol. vecerra, en Leon, en 1733 no. 3.
ORDENANZAS DEL PERÚ 1 tom. fol. pergamino lima 1752 no. 1.
Folio 72 V LEGISTAS P
PADILLA (Antonio) Comentaria. 1 tom. fol. perg.o en Salamanca 1569 no. 3.
PANCIROLA (Guido) 2 tom. fol. y 1 en 4 perg.o en Venecia, en 1610 no. 5.
To ga d o s y L e t ra d o s
312
Folio 73 V JURISTAS R
RAMIREZ ( Juan) Orden de santiago. 1 tomo fol. perg.o Burgos en 1599 no. 5.
REBARDO ( Jacovo) de usucap. 1 tom. 8 perg. en Antuerpia, en 1561 no. 1.
REBUFO (Pedro) de Poses. y concor. 2 tom. 4 y 8 perg.o en Leon, en 1576 no. 4.
REGLAS DE CANCELARIA 1 tomo 8 perg.o en Coimbra, en 1568 no. 3.
RETES ( Jose) opúsculos 1 tom. fol. perg.o en Salamanca, en 1658 no. 4.
RICCIO ( Juan) Colectanea 1 tomo 4 perg.o en Colonia, en 1620 no. 2.
RIPIA ( Juan) de rentas reales. 1 tom. fol. perg. en Madrid, en 1676 no. 4
RIVERA (Diego) Scrituras 1 tomo fol. perg. en Madrid, en 1596 no. 4.
RODRIGUEZ (Gaspar) de redit. 1 tomo fol. perg. sin lugar no. 1.
RODRIGUEZ (Amadeo) de testam. 1 tomo 4 perg.o en Madrid, en 1609 no. 5.
ROVERTO (Aurelio) de Rejudic 1 tomo 8 perg. en Colonia 1610 no. 5.
ROMERO (Fran.co) Llanto sagrado 1 tomo, 4 vecerra, en Milan, 1593 no. 5.
ROXAS (Ermenegildo) de incompat. 1 tomo fol. perg.o en leon, 1669 no. 5.
ROXAS ( Juan) de Sucesion. 1 tomo fol. perg.o en Salamanca 1581 no. 5.
Folio 74 R LEGISTAS 5
SALGADO (Fran.co) su obra 5 tom. fol. perg.o en Leon, en 1665 no. 5.
SALON DE PAZ (Marcos) Concil. y leyes de Toro 2 tom. fol. perg. Valladolid.
1568 no. 1 y 4.
SALON (Diego) Quest. Civ. 1 tom. 8 perg. en Medina, en 1576 no. 3.
SALZEDO (Pedro) de Leg. Pol. y examen. 3 tomos fol. perg. en Madrid 1678
no. 2.
SALZEDO (Geronimo) de Regim. Prim. 1 tom. fol. pergo. en Francfor 1655 no. 3.
SALZEDO (Ygnacio) Prat. Crim. 1 tomo fol. perg. en Alcalá, en 1587 no. 5.
SARMIENTO (Fran.co) Selecta 1 tom. fol. perg. en Antuerpia 1616 no. 5.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
313
Folio 74 V LEGISTAS T
TANCREDO, Orden judiciaria. 1 tomo 8 perg. en Leon, 1547 no. 3.
TARRAZA (Gregorio) Formul. 1 tomo 4 perg. en Palencia 1636 no. 2.
TELLO (Fernandez) Leyes de Toro. 1 tomo fol. perg. en Madrid. 1595 no. 4.
TIRAQUELO (Andres) 3 tom. fol. vec.a y 1 en 8 perg. en Francfort 1614 no. 5.
TONDURO (Pedro) 3 tom. fol. perg. en Leon, en 1657 no. 3.
TORNEO (Franc.co) Examen, y practica. 2 tom. 8 perg. en Alcalá, 1584 no. 2 y 4.
THESAURUS JURIS ROMANI 5 tom. fol. vec. en Leon, en 1725 no. 3.
Folio 75 R LEGISTAS V
VALENZUELA ( Juan) Concilia 1 tomo fol. perg. en Napoles, en 1618 no. 3.
YDEM, Contra venetos tomo 4 perg. en Valencia, en 1607 no. 3.
VELA ( Juan) de Poenis. 1 tom. 4 perg. en Salamanca en 1603 no. 2.
VELA ( Jose) Disertaciones 2 tom. fol perg. en Granada, en 1638 no. 5.
VELASCO (Gabriel) de Privil. Paup. 1 tom. fol. perg. en Madrid, en 1636 no. 3.
VEITIA ( Jose) Norte 1 tomo fol. perg. en Sevilla, en 1672 no. 3.
VILLALOVOS ( Juan) Antinomia 1 tom. fol. perg. en Salamanca, 1565 no. 1.
VILLAROEL (Diego) Practica 1 tomo 4 perg. en Madrid, en 1661 no. 1.
VILLAR (Ygnacio) Silva resp. 2 tom. fol. perg. en Madrid, en 1614 no. 2.
VIGLIO. Ynstituta en latín, y griego 2 tom. 8 perg. en Leon, en 1584 no. 2 y 5.
VINIO (Arnoldo) Ynstituta, y particiones 4 tom. 4 perg. en Venecia 1 625 no. 4.
VIVIANO ( Julian) de Jur. Patron. 2 tom. fol. perg. en Venecia, 1625 no. 4.
VOCABULARIO JURIS 3 tomos 8 perg. en Leon, en 1655 no. 2, 3 y 4.
VORVURG ( Juan) Enciclopedia 1 tom. 4 perg. en Francfort 1640 no. 3.
Folio 75 V LEGISTAS X
XIMENEZ (Sebastián) Concordancias. 2 tom. fol. perg. Toledo, en 1619 no. 1.
Folio 76 R LEGISTAS Z
ZEROLA (Tomas) Praxis 1 tomo. 8 perg. en Colonia, en 1618 no. 3.
To ga d o s y L e t ra d o s
314
CANONISTAS
Folio 54 CANONISTAS A
ABENDAÑO (Diego) Tesauro. 3, tom. fol. rec Antuerpia 1678 no. 5.
AGUSTIN (Antonio) Sus obras, 8, tomos, folio vecerra, en Luca en 1765,, a 1774
no. 2 ,, y su epitome 2, tom. fol. perg.o no. 3.
ALDERETE ( Jose) Alegación. 1, tom. a perg. c en Sevilla, en 1619 no. 3.
YDEM, de Religiosa disciplina. 2 tomos A perg. Dup. Sin lugar no. 1.
ALBERGINI (Fray Juan) Manual. 1 tom. en a perg. en Zaragoza 1671 no. 1.
Folio 54 R
ALEGACIÓN contra el s.or Almansa, 1 tom. fol. perg. o manuscrito no. 2.
YDEM, sobre doctrinas de Regulares. 1 tom. papel. en Lima 1619 no. 2.
ALAGONA (Pedro) Compendio. 1 tom. en 4 perg. o en Leon, en 1623 no. 3.
ALBERT (Miguel) Repertorio. 1 tom. fol. 4 perg. o en Valencia, en 1494 no. 3.
ALTECERRA (Antonio) De Parrochis. 1 tom. 4 perg.o en Tolosa, 1654 no. 1.
ALTAMIRANO (Baltasar) de Visita. 1 tom. 8 Perg.o en Sevilla, en 1581 no. 2.
AMIDENIO (Teodoro) de Stilo dat. 1 tomo fol. vitela, en Venecia 1654 no. 1.
ANDRES ( Juan) In Decret. 5 tom. fol. perg.o en Venecia, en 1612 no. 2.
ANDREUSI (Andres) Detuenda pace. 1 to, 4 peg.o en 1737 no. 5.
ANTONELO ( Juan) De Vigimini. 1 tom. 4 perg.o en Velerri, en 1650 no. 3.
ARCANGELO (Privilegios religiosos) 1 tom. 4 perg. veencia 1644 no. 5.
ARGUELLO (Gaspar) del sto. Oficio. 1 tom. fol. perg.o en Madrid, 1627 no. 2.
ARIAS ( Juan) Practica 1 tom. 4 perg.o en Madrid, en 1603 no. 1.
AUFRERIO (Estevan) Decisiones 1 tom. 8 perg. o en Leon, en 1538 no. 2.
AZPILCUETA (Martin) 5 tom. fol. m. y 1 menor en perg.o Colonia, 1616 no. 3.
YDEM, Concilia. 2 tom. en 4 perg.o en Roma, en 1602 no. 3.
AXENTINO (Accortis) Super Codicis 2 tomo folio perg.o no. 1 ariva.
Folio 56 r CANONISTAS D
DAOIS (Estevan) Yndize 2 tom. fol. perg.o en Burgos, 1623 no. 2.
DECISIONES Congregat. Concilii 1 tomo 4. perg. En Colonia 1611 no. 5.
DELBENE (Tomas) de Ofi. Ynquis. 2 tom. Fol. Perg.o en Leon, 1666 no. 1.
DELGADO (Fray Antonio) Arancel de Prleados 2 t. 8 perg.o Toledo 1598 no. 1.
DONATO ( Jacinto) Practica regular. 4 tom. fol. perg.o en Colonia 1675 no. 2.
DURANDO (Guillermo) Speculu. 3 tom. fol. perg.o, en Leon, 1545 no. 1
Folio 56 v CANONISTAS E
EINERICO (Nicolas) Directo. 1 tom. fol. perg.o en Venecia 1607 no. 1 dup.do.
ESCOVAR ( Juan) De Viroque foro 1 tom. fol. perg.o Cordova. 1642 no. 2.
ESCOVAR (Alfonso) Fuero escolar. 1 tom. 4 perg.o en Madrid. 1643 no. 5.
Folio 57 r CANONISTAS F
FAGNANO (Prospero) de Probabili 1 tom. (vec.a. Bruselas), en 1667 no. 4.
FARIA (Diego) ad Covarrubias. 1 tomo fol. perg.o en Leon, en 1676 no. 2.
FELINO in Decretales 4 tom folio maior perg.o en leon, en 1561 no. 2.
FERRARIS (Fray Lucio) Biblioteca 8 tom. fol. Vitela, en Roma, 1767 no. 2.
FERMOSINO (Nicolas) 2 tom. fol. perg.o en Leon en 1657 no. 3.
FERRIERE (Claudio) Novelas 2 tom. 4 vecerra, en Paris, en 1688 no. 4.
FILGUERAS (Manuel) Lucerna. 1 tomo 4 perg.o en Madrid, en 168º no. 2.
FORMULARIO de Notarios. 1 tomo, 8 perg.o en Venecia, en 1526 no. 1.
Folio 57 v CANONISTAS G
GAMBA (Pedro) de inunit. 1 tomo 4 perg.o en Leon 1622 no. 1 dup.do al 3.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
317
Folio 59 r CANONISTAS J
JUSTO Lipso cibiles Doctria tom 4. becerra Antuerpia, no. 1
Folio 59 CANONISTAS M
MADRIGAL (Alonso) 1 tomo 4 perg. en Nápoles, en 1616 no. 1.
MAURO (Pirro) de Solution 1 tomo 8 perg. en Franfort en 1631 no. 1.
MANTUA (Marcos) Equilibrio 1 tomo 8 perg.o en Roma, en 1615 no. 1.
MANUSCRITO canonico 1 tomo folio pergamino no. 3.
MARANTA (Roverto) de ord. Judit 1 tomo 8 perg.o en Leon, en 1567 no. 2.
MARSILIS (Fray Pedro) Yn Trident. 1 tomo 4 perg. en Valladolid, en 1618 no. 2.
MENA (Flores de) Practica 1 tomo fol. perg. en Franfort en 1605 no. 1.
MEDRANO (Diego) de Consenso 1 tomo 4 Vecerra, en Leon, en 1609 no. 3.
MENDO (Andres) de Jur: acad. 1 tomo fol. perg.o en Salamanca 1665 no. 1.
MEMORIAL de Misiones de la China. 1 tomo 4 perg. no. 3.
YDEM del primado de la Yglesia de Sevilla 1 tomo fol. perg.o no. 3.
MIRANDA (Fray Luis) Directorio 1 tomo fol. perg.o en Salamanca 1615 no.1
dup.do al 2.
MIÑANO (Fran.co) Basis pont1 tomo fol. perg.o en Madrid, en 1674 no. 1.
MONETA ( Juan) Tratados, 1 tomo 8 perg. en Colonia, en 1620 no. 1.
MONTALVO ( Juan) 1 tomo 4 perg. manuscrito no. 5.
MONTENEGRO (Alonso) Párroco 1 tom. fol. perg.o en Madrid, en 1742 no. 1.
MOSTAZO (Fran.co) de causiis piis 2 tom. fol. perg. en Leon, em 1685 no. 2.
MURILLO (Pedro) Curso canonico 2 tom fol perg.o en Madrid, 1742 no. 1.
Folio 60 v CANONISTAS N
NEVISANCIO ( Juan) Silva 1 tomo 8 perg. en Leon, 1572 no. 1.
NOVARIO ( Juan) de Electione 2 tom. fol. perg.o Nápoles, en 1638 no. 1.
NOVI LIVUS (Daniel) Controversias. 2 tom. 4 perg.o en Sena, en 1654 no. 1.
Folio 61 r CANONISTAS O
OLIVA (Feliciano) de Foro Ecle. 1 tomo fol. perg.o en Coimbra 1849 no. 3.
OLIVERA (Luis) de Mujer. Provisor. 1 tomo 4 perg.o en Valladolid 1670 no. 5.
OTALORA ( Juan) de Yrregul. 1 tomo 4 perg. en Salamanca, 1654 no. 1.
PAZ JORDAN ( Juan) Elucubrat. 3, tom. fol. Vitela, en Pavia, en 1650 no. 1.
PAZ (fray Juan) Consultas. 1 tomo folio perg.o en Sevilla, en 1687 no. 1.
PEIRINIS (Lorenzo) Const. Apostol. 1 tomo fol. Perg. en Sevilla, en 1687 no. 1.
PEREIRA (Benedicto) Palas Togat. 1 tomo 4 perg. en Evora, en 1636 no. 1.
PEKIO (Pedro) de regul. Jur. 1 tomo 4 perg.o en Helms tadii, 1588 no. 1.
PICLER (Vito) 2 tom. fol. perg.o y 5 tom. 8 Vecerra, en Venecia, en 1750 no.
3 y 4.
PIGNATELLI ( Jacovo) 9 tomos fol. perg.o en Cosmopoli, en 1711 no. 1.
PIRING (Enrrico) Curso canon. 4, tom. fol. Vecerra, en Dilinga, en 1674 no. 5.
Folio 62 r CANNONSTAS R
REBUFO (Pedro) Praxis, y de Verb. Sig. 2 tom. fol. perg.o, en Leon 1581 no. 1.
REIFENTEUL (Anacleto) Curso, y suma. 5, tom. fol. Vitela, en Reyno sobre
todo Reyno. 1, tomo 8 papel, en Roma, en 1661 no. 2.
RICIO ( Juan) Practica. 1, tomo 4 perg. o en Franfort en 1662 no. 2.
RODRIGUEZ (Fray Man.L) Queso.s y Bulas. 4 tom. fol. perg.o en Salamanca
1604 no. 2 y 3.
ROSA (Tomas) de Executo. 1, tomo folio perg.o en Roma, en 1666 no. 3.
ROSELA Suma, 1, tomo 8, vecerra, sin lugar, ni año no. 1.
Folio 63 r CANONISTAS S
SALELES (Sevastian) del Tribu. De la Ynquisit. Su Obra duplicada, de a dos
tomos folio perg.o en Roma, en 1653 no. 1.
SCORCIA ( Juan Baptista) In Select. Constiti. S 1 tomo 4 perg.o en Leon, en
1625 no. 1.
SANTARELO (Antonio) Var. Resol. 1 tomo 4 perg. o en Roma, en 1625 no. 1.
SALAZAR (Pedro) de Vso et quensuetudine. 1, tomo fol. perg.o Madrid 1579
no. 3.
SALZEDO (Francisco) Curia eclesiastica. 1, tomo 4 perg. en Madrid, 1624 no. 1.
SEGURA (Nicolas) defensa canonica, que contiene otros papeles. 1, tomo folio
perg.o no. 2.
SOUSA (Fray Anto.) Aforismos de Ynquisidores. 1, tomo 8 perg.o en Turnoni.
1603 no. 1.
SOCINO (Mariano) Coment. 1, tomo fol. Perg. perg.o en Augusta, en 1579 no. 1.
SOLL (Antonio) Tratado canonico. 1 tomo fol. Vitela, sin lugar, ni año no. 5.
SCHMALZGRUEBER (Fran.co) Curso canonico 7 tom. 4 Vecerra, en Dilinga
1719 no. 5.
To ga d o s y L e t ra d o s
320
Folio 64 r CANONISTAS T
TAMBURINO (Ascanio) de Jure Abatum. 1 tomo fol. perg.o en Roma, en 1629
no. 1 aviva.
TAPIA (Carlos) In leg. Fin. 1, tomo 4 perg. o en Nápoles, en 1586 no. 3.
TOMASINO (Luis) Discipli. Ecle. Y Disert. 4 tom. fol. Vecerra, en Leon 1706 no. 2.
TORREQUEMADA ( Juan) Summa Eclesiastica 1, tomo fol. perg.o Salamanca
1560 no. 1.
TURRIANO (Fran.co) Ac. Eclesial. 1 tomo. 4 perg.o en Colonia, en 1574 no. 1.
TUSCO (Cardenal) Su obra. 8 tom. fol. perg.o en Francfort, en 161 no. 3.
TRATADO de Indulgencias. 1, tomo 8 vitela, en Venecia, en 1723 no. 2.
TRATADO del Derecho de la Reyna Christianissima, a la Corona de España. 1
tomo 8º Vecerra, en Paris, en 1667 no. 4.
Folio 64 r CANONISTAS V
VANSPEN (Segezo Bernardo) su obra 5 tom. fol. perg.o en Venecia. 1769 no. 2.
VEGA (D. Feliciano de) Reelecciones. 1 tomo fol. perg.o, en Lima, en 1633 no. 2.
VELA (D. Jose) del Ausilio Secular. 1 tomo 4 perg.o en Granada, en 1635 no. 2.
VIESTNER ( Jacobo) 2, tom. 4 maior Vecerra, sobre las Decret. Monaqui. 1706 no. 4.
VILLAROEL (Fr. Gaspar) Gov. o eclesiastico. 2, tom. fol. perg.o en Madrid, en
1657 no. 2 (esta practica a bajo).
VRBINA (ntonio) Praxis ecles. 1 tomo fol. perg. o en Valladolid, en 1640 no. 1.
VRRITIGOITI (Diego Frances de) Pastoral de Regulares. 1 tomo fol. perg.o
Leon 1655 no. 1.
YDEM. de Competencias, y fuero de Conciencia. 2 tom. fol. perg.o en Zaragoza
1651 no. 3.
Folio 65 r CANONISTAS Z
ZAPATA (Fray Juan) de Just. Distrib. 1 tomo 8 perg.o en Valladolid 1609 no. 1.
ZEQUIO (Lelio) de Repub. Ecles. 1 tomo 8 perg.o en Leon, en 1601 no. 1.
ZEROLA (Tomas) Praxis. 1, tomo 4 perg. o en Leon, en 1607 no. 1.
ZIPEO (Fran.co) Jus Pontifitium. 1 tom. 8, perg.o Colonia en 1624 no. 1.
POLÍTICOS
POLITICOS H
HUARTE ( Juan) Examen de Yngenios. 1 tomo 4 perg. en Madrid, en 1668 no. 9.
POLITICOS Y
INSTRUCCIÓN para un joben principe. 1 tomo 8º. perg. vec. En Leon, en 1701
no. 9.
POLITICOS M
MARCO AURELIO. Relox de principes 1 tomo folio perg. en Sevilla, en 1534
no. 9.
MARQUEZ (sr. Juan) El governador Christiano. 1 tomo folio perg. en Amberes,
en 1664 no. 9.
MARZELAER (Federico) Su obra. 1 tomo 4 perg. en Antuerpia, en 1626 no. 9.
MENOQUIO ( Juan) estudios Eruditos. 1 tomo 8º perg. en Madrid, 1735 no. 9.
Miscelanea. 1 tomo 8º. perg. en Roma, sin año no. 9.
MORALES de Plutarco. 1 tomo 8º. Pergamino, en Leon, en 1551 no. 9.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
323
POLITICOS O
ORTEGA (Geronimo) de Reges institutote 1 tomo 8º. Vec. en Colonia, en 1572
no. 9.
OSORIO (Geronimo) Discursos politicos. 1 tomo 8º. Perg. en Madrid, en 1647
no. 9.
POLITICOS Q
QUEVEDO (dn. Francisco de) sus Obras. 5 tom. 4 perg. en Madrid, en 1656 no. 9.
POLITICOS S
SAAVEDRA (dn. Diego) Empresas politicas 2 tomos 4 el uno en Amsterdan, en
1655, y el otro en Valencia, en 1660 no. 9.
To ga d o s y L e t ra d o s
324
SENECA por Justo lipssio. 1 tomo folio vitela, en Antuerpia, en 1632 no. 9.
SEÑERI (Paulo) Sobre las cartas al provincial. 2 tomos 4 perg. en Madrid, en
1697 no. 9.
SERRE el secretario á la moda. 1 tomo 12 perg. en Ruan, en 1685 no. 9.
POLITICOS T
TESAURO (Manuel) Philosophia Moral 1 tomo 4 perg. en Madrid, sin año no. 9.
YDEM, Ydem, ydem
TORRES ( Juan) Filosofia Moral de Principes. 1 tomo folio pergamino, en
Burgos, en 1602 no. 9.
Tratado de la Amistad. 1 tomo 8 Vecerra, en París, en 1703 no. 9.
POLITICOS V
VALDECEBRO (f. Andrés de) el templo de la fama. 1 tomo 4 perg. en Madrid
1 680 no. 9.
VARGAS ( Juan) Manual de avisos 1 tomo 4 Vandana, manuscrito no. 9.
VELAZQUEZ ( Juan) Arde de memoria. 1 tomo 4 perg. sin lugar, ni año, no. 9.
VIECIO (Nicolas) de Republica 1 tomo 4 perg. en Antuerpia, en 1556 no. 9.
VILLAMEDIANA (El conde de) obras 1 tomo 4 perg. en Madrid, en 1634 no. 9.
POLITICOS U
UGARTE (Dn. Francisco) Origen de los goviernos. 1 tomo 4 perg. en Madrid
1 655 no. 9.
URRETA (Alonso) Dias de jardin 1 tomo 4 perg. en Madrid, en 1619 no. 9.
Anexo 3
TEOLOGICA DOGMÁTICA
SOTO O.P., Fr. Dominicus de. De Natura et Gratia. De ratione tegendi et
detergendi secretum. Salmanticae, imp. Ildefonso a Neyla et Io. B. a Terranova,
1574 / 7 vols prima ed.
SOTO O.P., Fr. Dominicus de- In quartum sententiarum commentarii. Tomus
secundus. Methynae a Campo, imp. Francisci a canto, 1581, vol. I.
SUAREZ, S. J. FRANCISCUS- Theologiae Summa, doubus tomis digesta.
Coloniae, 1732 vol. 2 semptibus Fratrum de Tournes.
SUAREZ, S. J. FRANCISCUS- Commentaria ac Disputationes in primam partem
Divi Thomas, de Deo uno & trino. Moguntiae, imp. Balthas. Lipii, 1607.
SUAREZ, S. J. FRANCISCUS- Ad primam secundae D. Thomas Lugduni, imp.
Cardon, 1628, vol. I prima ed.
3
Transcripción del Catálogo General de libros del fondo antiguo de la Biblioteca Colegio Mayor de Nuestra
Señora del Rosario, Bogotá, 2009. El catálogo corresponde a un trabajo de clasificación moderna elaborada
por la universidad y para este estudio se toma con las divisiones que ellos tienen para textos tanto de derecho
canónico como de derecho civil, por áreas.
To ga d o s y L e t ra d o s
326
TEOLÓGICA MORAL
ARAGONIUS, FR.PETRUS DE- De justitia at jure. Salmanticae imp. Guill.
Foquel, 1590.
ARAUXO, O.P., FRANCISCUS DE- Decisiones morales ad statum ecclesiaticum
et civiles pertinente. Lugdini, imp. Borde & Arnaud, 1664. Ed. Prima
BAÑEZ, DOMINICUS. O.P. De justitia et jure, decisiones. Salmaticae, imp. Fratr.
Renaut, 1594 lessius, S.J., Leonardus. De Justitia et Iure. Libri IV.Venetiis,
imp. Bonifaz, Viezzeri, 1734 novisima ed.
MOLINA, S.J. LUDOVICUS- De justitia et Jure, Opera Omnia. Coloniae Allorbr.
Imp. Frat. De Tournes, 1759 vols. 3 novissima ed.
MOLINA, S.J. LUDOVICUS- De Iustitia et Iure. Moguntiaesumptibus Arnoldo
Mylii, 1502 vol. 3.
ROMERO, MIGUEL ANDRÉS, medico y abogado. El vicio disfrazado. Madrid,
1725, vol. 1.
SOTO SEGOBIENSIS. DR. DOMINICUS. De Iustitia et Iure. Libri decem.
Salmanticae, vol. I
SOTO, F. DOMINICUS. De Iustitia et Jure. Methymnae, vol. I
SOTO, F. DOMINICUS. De Iustitia et Jure. Libri decem. Salmanticae. Imp. Ioa.
Bap.a Terranova, 1568 vol. I.
SOTO, F. DOMINICUS. De Iustitia et Jure. Salmanticae. Bap. A Terranova, 1571
vol. I.
SOTO, F. DOMINICUS. De Iustitia & Iure. Methymnae a Campi, imp.
Franciscus a Canto, 1580. Expensas Benedicto Boyeri.
SUAREZ. S.J. FRANCISCUS. Tractatus de legibus, in decem libros. Bruxellis.
Imp. Ioan. Keerbergius, 1612, vol. 1.
POLÍTICA
CABRERA, S. J., JUAN DE- Crisis política determina el más florido imperio y la
mejor institución de Principes y Ministros. Madrid, imp. F. de Huerta, 1719,
vol I, págs. 770.
SOLORZANO PEREIRA, IOANNES DE- Emblemata centum, regio politica.
Matriti, imp. Domin. Garciae, 1653.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
327
DERECHO CONSTITUCIONAL
Manifestación de las máximas de Francia, escritas a la luz de la verdad y
presentadas al Parlamento de París, Zaragoza, imp. Diego Dormer, 1684, vol.
I, págs. 23.
TOBAR VALDERRAMA, DIEGO DE- Instituciones políticas: al Principe de
las Españas y Nuevo Mundo. Madrid, imp. Catalina de Barrio, 1645, vol. I,
págs. 207.
DERECHO ADMINISTRATIVO
AVENDAÑO, I.C., PETRUS NUNIUS DE- De exequendis mandatos Regué
Hispaniae. Salmanticae, imp. Io. de Canova, 1554, vol. I, págs. 146 y 32.
BALLESTEROS, TOMÁS D E- Tomo primero de las ordenanzas del Perú por
don Melchor de Navarra, y de la Bula de Benedicto XIV estableciendo
el tribunal de la Santa Cruzada. Lima, imp. Fco. Sobrino, 1752, vol. I,
págs. 339.
DERECHO PENAL
BAIARDUS, IOANNES BAPTISTA- Additiones et annotationes ad Julii Clari
Lib. V. sententias, sive practica criminalis. Parmae, imp Erasmi Viothi, 1603,
vol. I, págs. 256.
To ga d o s y L e t ra d o s
328
DERECHO CIVIL
ACEBEDO, ALPHONSUS DE- Opera, commentarii iuris civiles in regias
constitutiones, tomo I a IV. Lugduni, imp. Fratres de Vile, 1737, vols. 2, págs.
775 y 946.
ACEBEDO, ALPHONSUS DE- Commentarii iuris civiles in Hispaniae
constitutiones, tous tertius et quartus. Lugduni, imp. Fratres deVille, 1737,
vol. I, págs. 471 y 304.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
329
JUSTINIANUS- Digestum libro XXIV, vol. I, págs. 2250 y 94. Ed. Cum casibus
Domini Viviani Bononiensis.
JUSTINIANUS- Digestum Lib. XXVIIL Vol. I, págs. 912 a 2006
JUSTINIANUS- Digestum novum. Vol. I, págs. 1742.
JUSTINIANUS- Corpus Juris civilis, tomus secundus. Augustae Taurinorum,
imp. Regia. 1757/82, vols. 2, págs. 1499 y 1499, repetido.
JUSTINIANUS- Corpus Iuris civilis romani, tomus II, cum notis Dionysii
Gothofredi, quibus acceserunt F. Modii et aliorum. Coloniae Munatianae,
imp. Frat. De Tournes, 1781, vol. I, págs. 792, Ed. Nova.
JUSTINIANUS- Corpus Iuris civilis, prudentum responsa Caesa- rumque
rescripta complecteus. Lugduni, 1591, vol. I, págs. 2160.
JUSTINIANUS- Corpus Iuris civilis, cum commentariis Accursii, sholiis Conti,
et Dionysii Gothofredi (Digestorum Libri XXIV). Lugduni, imp. Cardon,
1612, vol. I, págs. 2250 104, Ed. Novissima, tomus I.
KEES, IOANNES BAPTISTA- Novarum decisionum Senatus Granatensis.
Turoni, imp. Petri Prost, 1647/48, vols. 2 págs. 422 y 259, Postrema ed.
LARREA, IOANNES BAPTISTA- Novarum decisionum Senatus Granatensis.
Turoni, imp. Petri Prost. 1647/48, vol. 2, págs. 422 y 259. Postrema ed.
LÓPEZ A. TOVAR, GREGORIUS- Index materiarum Septem Partitarum.
Salmaticae, imp. Portonariis, 1576, vol. I.
LÓPEZ, GREGORIO- Las Siete Partidas del Rey D. Alfonso el sabio, reimpresa
por el tenor de la edición de Salamanca, por D. Joseph Berni y Catalá.
Valencia, imp. Benito Montfort. 1767, vols. 3, 2/1 a 3.
LÓPEZ, GREGORIO- Las Siete Partidas del Rey D. Alfonso el sabio, reimpresa
por el tenor de la edición de Salamanca, por D. Joseph Berni y Catalá.
Valencia, imp. Benito Montfort. 1767, vols. 3, 2/1 a 3.
LÓPEZ DE PALACIOS RUBIOS, JOANNES- Glosemata legum Tauri, quas
vulgo de Toro appellant. Salamticae, imp. Io. De Iunta, 1542, vol. 1, págs. 140.
MAGILIUS I. C., IOANNES ANTONIUS- De impugnationibus et detractionibus
in legitima Trebellianica et alliis quartis bonorum hacreditariorum Tractatus,
Venteéis, imp. Florav. Patri, 1618, vol. I, págs. 729.
MANTUA BENAVIDIUS, PATAVINUS- Dialogismos, sive glossarium Juris,
semonesque Socratici. Venetiis, imp. Christoph. Zanetti, 1572, vol. I,
págs. 505.
MARESCOTTUS, HERCULES- Variarum resolutionum in quipus utrisque
Juris materiae tam beneficiales quam prophanae veniunt. Francofurti, imp.
Palthenii, 1617, vol. I, págs. 102 y 271. Ed prima in Germania.
MARINGO CORLEONENSIS, MARIANUS- Practica super Ritu Mag.
Curiae ac regni Siciliae curiarum. Panormi, imp. Francisci Cinti, 1619,
vol. I, págs. 224.
MARTÍNEZ DE OLANO, IOANNES- Concordia et nova reductio antinomiarum
Juris communis. Burgis, imp. Ph. Iuntae, 1575, vol., págs. 274.
To ga d o s y L e t ra d o s
342
DERECHO COMERCIAL
BEATIUS, GASPAR- Prima pars tractatus de Inope dibotore ex Castellana
consuetudine creditoribus addiendo. Granatae, imp. Hugonis Menam, 1570,
vol. I, págs. 158.
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
349
DERECHO PROBATORIO
BOERIUS NICOLAUS- Decisionum pars I aurea in sacro Burdegalentium Senatu,
in juris perirorum comoditatem. Lugduni, imp. Antonii Vincentii, 1547, vol. I,
págs. 607.
CAVALCANUS, I.C. HORTENSIUS- Practica et theorica de Testibus. Mantuae,
imp. Francisci Osannae, 1604, vols. I, págs. 313.
GUTERIUS, IOANNES- Tractatus de juramento confirmatorio et aliis in jure variis
resolutionibus. Madrita, imp. Ludov. Sánchez, 1597, vols. 2, págs. 328 y 328.
GUTERIUS PLACENTINUS, IOANNES- Tractatus de juramento confirmatorio et aliis
in jure variis resolutionibus. Salmanticae, imp. Jo. A canova, 1574, vol. I, págs. 250.
MASCARDUS, I.C., JOSEPHUS- De probationibus. Conclusiones probationum
omnium quae in utroque foro quotidie versantur, volumen L. Lugduni, imp.
Stephani Michaelis, 1588. Vol. I, págs. 348.
MASCARDUS, I. C. JOSEPHUS. Conclusiones omnium probationum quae in
utroque foro quotidie versatur. Augustae taurinorum, imp. Io. Dom. Tarini,
1623, vol. I, págs. 436.
MASCARDUS, I.C., JOSEPHUS- Conclusiones omnium probationum quae in
utroque foro quotidie versantur, volumen tertium. Augustae Taurinorum, 1615,
vol. I, págs. 170.
ROMANUS, ANOTNIUS GABRIEL- Conclusionum seu regularum ad materiam
probatioriam pertinentes libri septem. Romae, 1570, vol. I, págs. 937 a 1600.
DERECHO PROCESAL
BOBADILLA, CASTILLO DE- Politica para Corregidores y señores de vasallos,
jueces, eclesiásticos y seglares, tomo Io. Amberes, imp. Juan B. Verdussen, 1704,
vol. I, págs. 710.
BOBADILLA, CASTILLO DE- Politica para Corregidores y señores de vasallos,
para prelados, y de lo tocante a las Ordenes y Caballeros de ellas. Madrid, imp.
Real, 1775, vol. I, págs. 940. Tomo Io.
BOLERO ET CAXAL, DIDACUS- Tractatus de Decoctione dibitorum fiscalium et
forum boniscurandis. Matriti, imp. L.A. de Bedmar, 1675, vol. I, págs. 662.
BUCCARONIUS, I.C. HIERONYMUS- De differentiis inter judicia civilia et
criminalia Tractatus. Romae, imp. Barth. Zenetii, 1624, vol. I, págs. 410.
To ga d o s y L e t ra d o s
350
poft. Varias Editiones correctiora &. Cum Veteribus ac melioris notae exemplaribus
de novo Collana, &. Ab innumeraris mendis fenó repurgata. Genevae Sumptibus
Fratrum de Tournes MDCCLXII ( Hay dos tomos y una nota que dice: Pertence
a la Librería del Predicadores del Convento de Tunja).
• Digesti novi, Digestorum novum ( Sin autor o compilador, no tiene las primeras
páginas y no se puede ver el año de edición).
• Jus Canonicum Universum clara método juxta titulos quinque Librorum
Decretalium in Quaestiones distributum, solidisque Responsionibus, &.
Objetionum solutionibus dilucidatum authore R.P.F. Anacleto Reiffenstuel ordinis
Minorum S. Francisci Reformat. Provinciae Bavariae Lectore Jubilato Editio
Novissima cui accessit tractatus de Regulis Juris Cum Repertorio Generali Totius
Operis. Antuerpiae Sumptibus societatis MDCCLV (hay cuatro tomos).
• D. Didaci y Bañez de Faria J.U.P. Gaditani, Caroli II. Hispaniarum, in diarumque
Regis Catholici á Consiliis, in Cancelleria de Buenos Aires Regii Fisci Patroni,
&. In Goatemalensi Praetorio apud American primarios inter Judices adscripti
Additiones, observations et notae ad libros variorum Resolutionum ilustrissimi
ac reverendissimi D. Didaci Covarruvias a Leiva, episcope segobiensis, ac suprimi
concilii Castellae Praesidis, Editio Nova. Genevae, Sumptibus Fratrum de Tournes
MDCCLXII (Con una nota que dice: Pertenece a la librería de Predicadores del
Convento de Tunja. Hay tres tomos).
• Quinta Compilatio Epistolarum Decretalium honorii III. Pont. Max. Nunc recéns
é tribus vett.M.SS. in lucem data, &. Notis illustrata, Studio, &. Industria Innocentii
Cironii, Iuris Utrisque Professoris, Canonici, ac Ecclesiae &. Academiae Tolosanae
Cancillerij, cum duplici Indice, primo, titulorum, altero rerum verborúmque
Alphabetico. Tolosae Apud Arnaldum colomerium. Regis, &. Academiae Tolosanae
Typographum MDC XLV.
• Cursus Juris Canonici Hispani, et Indici (No tiene portada en un cuadro interior
dice: Index Alphabeticus titulorum Quinque Librorum Decretalium: Sexti,
Clementinarum, et Extravagantium. Ubi sub unoquoque titulo Apponitur numerus
capitulorum ipsius et pro jure hispano afferuntur tituli concordantes Partitarum,
Recopilationis Castellae, &. Recopilationis Indiarum.
• Fratis Dominici Soto Segoviensis, Theologi, ordinis Praedicatorum, Caesarae
Maiestati á facris confessionibus, Salmanti Professonis, De Justitia &. Iure
libridecum. Salmanticae Excudebat Iannes Baptista á Terranova MDLXIX (nota
que dice: es del conbento de Ntor. Domingo de Tunja).
Anexo 5
Solicitadas las Constituciones no han sido habidas, ni persona que pueda dar
razón de que en algún tiempo se formasen; y aunque el D.P. Ror. Expuso que
después del extrañamiento se hicieron una y remitieron para su aprobación á
España; pero ni copia de ellas se reservó, ni parece que se han tenido otro Norte
para la colocación de grados y manejo de este cuerpo literario, que la tradición,
y confusa memoria de lo pasado; Por lo que se vió la Real Audiencia en la
M ó n i c a Pa t r i c i a Fo r t i ch Na va r r o
355
precisa necesidad de mandar que hasta la resolución de V.M4 S.M. se (Folio 1v)
guarden las Constituciones de Lima que requieren cinco cursos para el grado
bajo el reato de nulidad y que se formase y remitiese por otro P.R. una especifica
regulación de la cantidad que por cada grado deba contribuírse, reservando en
su vista proveer lo demás á que se excitó su atención (?) deseosa del mayor
provecho del bien común; franqueando al Fiscal Protector los testimonios que
pidió no sólo para dar cuenta á S.M. como lo ha verificado, sino también para
presentarlo en esta junta, á consecuencia del pensamiento que propuso sobre,
lo útil y necesario de la creación de Universidad pública, y estudios generales
en esta capital con que y no de otro modo se cortará radicalmente el desorden;
para cuya resolución lo presenta debidamente como irrefragable documento de
la verdad y convencimiento demostrativo de la falta de sinceridad con que el P.
fr. Jacinto Buenaventura vistió un memorial para contradecirla ante el Con.so.
Rl. en el extraordinario (‘?) que no puede leerse sin asombro de las impetuosas
que vierte, suponiendo hechos que nunca existieron sin perdonar lo sagrado de
V.E.5 cuyas providencias acrimina con su espíritu de preocupación é iracundía
que verifica literalmente lo de los proverbios de que su furor é ira no tiene piedad
y á su rápido ímpetu de maledicencia no hay su (Folio 2r) frimiento que pueda
tolerarlo, por ser su memorial más pesado que l duro peñasco, y más gravosas que
las arenas sus claúsulas, como dijo Salomón.
4
En el manuscrito original aparecen tachadas, estas dos letras que parecen apelar al Rey o virrey, se reemplaza
igual por la forma S.M. Su majestad, que será usada varias veces en el texto, algunas con la forma Md., o la forma
V.E. Vuestra excelencia.
5
La forma V.E. puede tambien estar referida al Fiscal que preside la Real Audiencia, en el evento de dirigirse a
las providencias que el sujeto profiere.
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356
que bien los ha visto el citado(?) y por esto tal vez presumió que se le descubrían;
pues su queja parece la funda en que pidiendo el Fiscal una Universidad que
como madre abrigue los (Folio 2v) ingenios, donde los seculares puedan aspirar
al premio del Magisterio y enseñanza, logren el socorro de su dotación para
fomento de sus familias, y se confieran los grados con las debidas formalidades
á los beneméritos, sin que los ignorantes logren este distintivo, ha creído que
fue decir que al presente nada de esto se consigue por medio de la facultad que
su Religión disfruta. Y fuera de que este modo de representar el daño es de
los más modestos, y benignos; nadie dirá que es falsa la ilación ni que el fiscal
agravia en dar de ello cuenta á quien debe para su remedio; y por esto debiera
el P. Buenaventura amar, y no injuriar al Fiscal que asi lo enseña el Anoco. Dor.
Sto Thomás en el capítulo 126 opuse so 19 citado de contrario: qui ordinate
repraehendunt et intentione correctionis, sunt non solum ferendi, sed diligendi”,
a que concuerda con el quodlibeto 40 art. 13, y por esto el mismo Santo acusa en
el clero la ignorancia para probar que es necesaria la enseñanza de los regulares
y el Seráfico Dr. San Buenaventura les imputa defectos que admira, sin que por
esto se pueda argüirles que se valen de las armas vedadas de la calumnia. Con
mayor Claridad declaman los defectos en la colación de grados Bererlink(‘?), y
Luis Vives, sin la nota de calumniantes, sino con el lauro de (folio 3r) celosos del
bien público. Este es el que protesta el fiscal á Dios y al rey, que le han movido á
expresar lo que el P. Buenaventura llama calumnia y es verdad demostrada.
El mismo Padre confieza que nadie podrá negarse las Universidades son muy
proficuas al bien público y convenientes á la común sociedad, sino el que adaptare
las maximas de Nicleff. que S.M. sin causar agravio alguno puede suspender
el pri (folio 3v) vilegio de Universidades que tiene concedido á la Provincia de
Predicadores y establecer otra, dotándola, ó de las Temporalidades ocupadas, ó
del Real erario y aunque con esta confesión parece que no queda qué desear,
pues siendo útil á sus reinos y pudiendo S.M. ejecutarlo sin agravio, es visto que
nada desea tanto como la felicidad de sus vasallos; y que por consiguiente no
es parte la provincia y convento de de Santo Domingo para contradecirlo: con
todo, tiene el Fiscal Protector pr. Preciso repetir; que sobre el seguro supuesto de
la utilidad y necesidad de esta obra conviene que su situación sea precisamente
en esta capital y no en otra de las ciudades del Virreinato, porque no habiendo
en algunas de ellas universidad que pueda llamarse rigorosamente pública, ni
cátedras dotadas y fundadas con las formalidades que requieren y disfrutan las
universidades de España, Lima y México; habiéndose de enriquecer el Reino con
6
La grafía que representa el número no es muy clara, bien podría ser captítulo 42. cfr. Con la obra de Santo Tomás.
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esta preciosa joya nadie tiene más derecho á poseerla que esta ciudad de Santa
Fé por ser cabeza del Reyno en que V.E. preside y donde tienen su asiento los
principales Tribunales del Rno. de la R.L. Aud.a Pretorial, Tribunal de cuentas,
Iglesia Metropolitana, Casa Real de Moneda, numerosa juventud en dos lucidos
colegios y abundante número de religiones. De donde dimanan las provisiones
de oficios y empleos en lo militar, y político para todo el Reino. A don(folio4r)
de es preciso acudir para la determinación de casi todas las causas graves, tanto
de Justicia como principalmente de gobierno y manejo de Real Hacienda siendo
por todo el centro de donde nacen las lineas del mando y jurisdicción y occeano
á donde finalmente se restituyen. La situación territorial es la más cómoda, como
colocada casi en el centro que de todas partes pueden acudir los estudiantes
satisfechos de que la abundancia y moderado precio de sus bastimentos es un
aliciente que facilita á los pobres el estudio, que en otras partes dificultaría su
miseria. Los negocios forenses de la Chancillería y demás tribunales contribuyen
á que sin variar de lugar, se instruyan los jóvenes en materias civiles políticas
y contenciosas hasta Laurearse de abogados ó seguir la senda de oposiciones á
prebendas, cátedras o distintos ejercicios, según lo vano de sus inclinaciones, y
por otra parte, no es tanto el cúmulo y golpe de asuntos, que pueda degenerar en
confusión ni impedir los progresos del aprovechamiento literario, como para en las
Cortes se alegó alguna vez por inconveniente; y por la experiencia se ha verificado
que aún en ellas han sobresalido no pocas universidades, como en la aplicación
del que fue Colegio Imperial en Madrid, explica la colec (folio 4v) ción impresa,
ninguna de las restantes Ciudades tiene fundada universidad que pueda decirse
que se le priva con la erección de la que se propone; y en ninguna concurren las
proporciones que van referidas de Santa Fé. La de Quito sólo ha gozado de la
facultad de conferir grados que disfrutaban las dos Religiones, del modo que en
esta cap. 1 sin que en rigor haya habido ni exista universidad pública; solo tiene
Tribun.l de Rl. Aud.a corresponde al extremo del Virreinato, y se dificultaría la
concurrencia de la juventud de muchas ciudades distantes, y sin agravio parece que
corresponde la preferencia á esta capital, respecto de Quito, Popayán y Cartagena;
pues contribuye también la circunstancia de que casi de todos los lugares del
Rno. se gira correspondencia á esta capital, para las pretensiones, Comercio y
dependencias que ocurren, y las que hubieren de remitir sus hijos á la universidad,
tienen con este motivo personas conocidas y de confianza á quienes encargan su
asistencia y cuidado, lo que no sucede en otras ciudades.
(Folio 5v)
Pero para qué es molestar la superior atención de la junta, con referir lo que
sabe, cuando el mismo expediente agitado en la Real Audiencia, cuyo testimonio
ha presentado, publica que aquel Regio Senado exitó al oficio fiscal para que pidiese
remedio noticiado del defecto, conceptuando que el origen del daño representado
sobre la multitud de abogados consiste en el disimulo y falta de formalidad en la
colación de grados. Cuando la referida Real Audiencia expresa en su auto haber
yá hecho el justo reparo en los títulos de Doctor declarando que conviene ocurrir
prontamente al remedio de este desorden, para evitar los daños que ocasiona.
Cuado finalmente llegó a manifestar que se había exitado su atención deseosa del
bien público á expedir otras providencias, prescribiendo al Rector que se formase
una específica regulación de la cantidad que se deba contribuir y su distribución.
Todo lo cual representa á la vista un convincente testimonio de que la literatura
padece, y no se confieren los grados como es debido, por falta de formalidad en el
convento facultado para ello; cuya verdad se convence más si se advierte que aun
todo el respeto y autoridad de la Real Audiencia no ha bastado para (folio6r) que se
obedezca su providencia, pues rescindiendo de que según noticias extrajudiciales,
se han dado grados posteriormente, contraviniendo á lo mandado; lo cierto es que
no se ha formado y remitido al Rl. Acuerdo la regulación prevenida, quedándose
las cosas en el mismo estado que tenían.
Pero pasando a tiempos más cercanos á los nuestros, consta que habiéndose
pedido al Papa Inocencio XI que declarase ser esta cierta verdadera y real
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359
este nombre disfrutaban los regulares expatriados, como los 2500 ps impuestos
a senso los 500 que debe el Colegio de Quito, y los 13000 de las Cátedras
de Canones y Leyes, podrán añadirse los senso ó rentas pertenecientes á las
congregaciones extinguidas en la Iglesia del que fue Colegio Máximo de esta
ciudad, que importarán 10000 ps. escluso lo incobrable; (folio 11r) como también
2,332 ps. por impuesto en carga de algunas misas que podrán celebrarse por
los catedráticos sirviéndoles de aumento á su dotación, siguiendo las acertadas
huellas de lo resuelto por S.Md. á consulta del Consejo en el extraordinario por
lo respectivo á la aplicación hecha en Palma, en la Isla y Diócesis de Mayorca,
y conforme á lo igualmente dispuesto en Granada y Sevilla, podría situarse la
Universidad en lo que hoy se llama Patio de Estudios, donde existen ocho piezas;
ó generales de toda extensión y capacidad para las lecciones profanándose con
la autoridad del Illmo Sor. Arzobispo la Capilla que se apellida de Nuestra
Señora de la luz, con los ritos acostumbrados para que sirva á los actos públicos
y demás conferencias de estilo, adjudicándose en línea el terreno desierto hasta
la esquina que hace frente á la casa del actual Dean Dn. Fran.co Xav.er de Moya
donde podrá edificar á su beneficio, según parezca más oportuno; añadiendo
3000ps. Del oficio del Provincia que solo tienen la carga de contribuir diez y
siete y medio doblones á siete viudas, durante el novenario de Nuestra Señora
de los Dolores, quedando el residuo aplicable á objetos útiles por estado según la
disposición del Fundador á arbitrio de los expatriados.
(Folio 11v)
granjeándose aprecio entre las gentes de modo que el común de los indios
conozca el beneficio que se les (folio13v) dispensa promoviendo su exaltación y
se estimulen á conseguirlas.
Otro sí. Son aplicables á este importante objeto las nueve tiendas o accesorias
inclusas en el edificio de dicho Colegio; con cuyo arrendam.to se supliran los
cuatro mil y quin.tos que exhibió el semi.rio de sn. Bart. Me para completar los
trece mil de dotación de Cátedras de Cánones y leyes de que va hecha mención,
y tal vez reclamará para sus alumnos sobre que se podrá determinar en just.a
(folio A recto),
Relación de los meritos y circunstancias del Dr. Don Francisco Antonio Moreno
y Escandón, Cathedratico que fué de Instituta, y ahora de Prima en Sagrados
Canones en la Universidad Xaveriana de la Ciudad de Santa Fé en el Nuevo
Reyno de Granada, abogado de aquella Real Audiencia, y Defensor de Rentas
Decimales de aquel Arzobispado7.
7
Transcripción de la versión original del documento, en forma impresa que reposa en el Fondo de libros raros
y manuscritos de la Biblioteca Luis Ángel Arango. Bogotá. Elaborada en junio 18 de 2009 para la presente
investigación. Se ha conservado la escritura en su versión inicial, sin la transcripción de las S sibilantes, y el acento.
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363
Que el mencionado Doctor Don Francisco passó en sus tiernos años à la ciudad
de Santa Fè y después de haberse instruido en la Latinidad, y Letras Humanas,
se le recibiò, en atención à su nobleza, y buenas circunstancias, por el Colegial
en la Real, y Mayor de San Bartholomè, en donde por espacio de tres años cursó
la Philosophìa con aprovechamiento; y haviendo precedido los Actos literarios,
que se acostumbran en aquella Universidad, se le confieron por ella los Grados
de Bachiller, y Maestro en esta Facultad.
Que assi por su adelantamiento en los estudios, como por sus amables prendas,
y dotes naturales, ha sido electo, y nombrado comun acuerdo para regentar en
aquella Universi (folio A2verso) dad la Cathedra Instituta, como lo executó con
general aprovechamiento, promoviendo la Juventud al estudio, y aplicacion de
tan ùtil, y necessaria Ciencia.
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Assimismo consta, que hallandose el citado actual Virrey con prevencion de que
no destìne Ministro alguno de aquella Audiencia para que ayude al despacho
de la Fiscalìa, que exerce Don Joseph Peñalver, nombrò en virtud de sus
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365
Facultades, por Abogado Fiscal para lo que haga, al mencionado Doctor Don
Francisco Antonio Moreno, en atención à su literatura, y singulares prendas, y
à que el referido Ministro, con la muchedumbre de negocios, que ocurren en
aquel Superior Gobierno, no siempre puede por sì solo dàr aquella prompta
expedición, que se requiere.
En otra Carta para S.M. de veinte de Marzo de mil setecientos sesenta y dos
repite el muy Reverendo Arzobispo de Santa Fé lo que queda expressado; y añade,
que frecuentemente pide dictamen al referido Doctor Moreno en las causas mas
graves de aquella Curia Eclesiastica, especialmente en las apeladas en los Obispos
Sufraganeos; y que la justificación, literatura, y demàs cùmulo agradable de
circunstancias de este sugeto, le mueven à presentarlo sin exageración, para que se
le destìne, y emplee en lo que sea mas conveniente al Real Servicio.
Y últimamente, la Audiencia de aquella Capi (folio A4) tal hace presente à S.M.
en Carta de veinte y ocho de Junio del año proximo passado los particulares
talentos del mencionado sugeto, sus apreciables circunstancias, y la juiciosa
conducta con que se ha portado, y se maneja en todos los referidos ministerios,
y encargos, para que S.M. en Carta de veinte y ocho de Junio del año proximo
passado los particulares talentos del mencionado sugeto, sus apreciables
circunstancias, y la juiciosa conducta con que se ha portado, y se maneja en todos
los referidos ministerios, y encargos, para que S.M. se digne tenerle presente en
la provision de los Empleos, que sean de su mayor agrado.
(folio A4 Verso)
Anexo 7
Folio 1033 r.
Yten Antonio Pérez de Justitia et jure, un tomo en folio
Yten Marin Curso Theologico, tres tomos en folio
Yten Gonzales, sobre la regla de carceleria un tomo en folio
Yten Fragoso de regimine reipublice christiane, tres tomos en folio
Yten Decreto, decretales y sexto, tres tomos en octavo, y una decretal sin glosa
Yten Texto del Derecho Civil dos tomos en folio
Yten otro tomo Yndex
Yten Ripia de rentas reales treinta, y seis tomos de diferentes alegaciones en Dxo.
en folio.
Yten Mendo, sobre la bulla de la Cruzada un tomo en folio
Yten San Bernardino de Cena, quatro tomos en folio
Yten Leandro, siete tomos en folio
Yten Izquierdo, dos tomos en folio
Yten el Curso Salmatisense, seis tomos en folio
Folio 1033 v
Yten Serrana, quatro tomos en folio
Yten Pascualigo, dos tomos en folio
Yten Barboza, sobre el Concilio, un tomo en folio
Yten Lugo, Respuestas Morales, un tomo en folio
Yten Donato, quatro tomos en folio
Yten Dicastillo, sus obras, tres tomos en folio
Yten Aguilar, Curso Philosophico, dos tomos en folio y en theologico, ocho
tomos en quatro.
Yten Lineo Apotegmas de San Ignacio un tomo en folio
Yten Hurtado, Curso philosophico, un tomo en folio
Yten Carmelo In Dioij Thomas, dos tomos en folio
Con lo qual por ser tarde, se suspendio esta diligencia para proseguirla otro día;
y dichos señores los rubricaron por antemi de que doy fee= hay dos rubricas=antemi
Joseph del Rojas: escribano de su majestad. En la ciudad de Santa Fee a veinte y
quatro de septiembre de mil setecientos secenta y (*)siete años, en procesución de
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estas diligencias, los señores jueces comisionados, abierta que fue la puerta de esta
librería, continuaron su imbentario en la forma que se sigue=(*)folio 1334r. (hay
nota sobre continuación al margen de la hoja 1333).
Folio 1334 v.
Yten Gravina Apología de probabilismo un tomo en quatro
Yten Picheli. Derecho Canonico cinco tomos en octavo
Yten Smaslgrueber, siete tomos en cuarto un tomo sobre los libros sagrados,
en folio
Yten Gibalino de Isuras dos tomos en folio
Yten Abendaño Problemata, un tomo en folio
Yten Ramírez Teología, tres tomos en folio
Yten Segura, dos tomos en folio
Yten Gutierrez Hurtado, un tomo en folio
Yten Campo Verde de incarnat.co dos tomos en cuarto
Yten Noceti Veritas Vindicata dos tomos en cuarto
Yten Fray Joseph el espíritu santo, Medula Teología tres tomos en cuarto
Yten Diva Teología, tres tomos en cuarto
Yten Corderio, su obra ocho tomos en folio
Yten Meldero de Virtutibus, un tomo en folio
Yten Bocio, dos tomos en folio
Yten Fabro, Teología, un tomo en folio
Yten Becano, su obra siete tomos en octabo
Yten Cursus mobus philosophia, quatro tomos en octavo
Yten Maur (?) Philosophia, quatro tomos en octavo
Yten (?) Teología dos tomos en folio
Yten Ortis Caduceo Theologico, dos tomos en folio y cinco en cuarto
Yten Ulloa, su obra nuebe tomos, tres en folio y cinco en cuarto
Yten Barbadiño Methodo de estudiar, quatro tomos en cuarto
Yten Stefer Biblia inmaculada doze tomos en folio
Yten seis tomos en octavo, y uno en folio Anonimos, sobre la conducta de los
jesuitas, y su enseñanza
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Yten Letras críticas contra Lampridio, tres tomos dos en cuarto y uno en octavo
Yten Buenani Recreación del osio, en italiano, un tomo en cuarto
Yten Plaza sobre la concepcion, un tomo en folio
Yten Cancelote Anales Marianos, quatro tomos en folio
Yten Kolve, Curso Theologico ocho tomos en octabo
Yten Viner, Aparato para la jurisprudencia, tres tomos en quatro menor
Yten Corsini, Curso philosophico, siete tomos en octavo
Yten Mangol, Curso philosophico, tres tomos en cuarto
Yten Ripalda, Sobre el maestro de las sentencias, un tomo en folio
Yten el mismo de Entesupernaturalis, un tomo en folio
Solicitudes de abogados
ante la Real Audiencia de Santafé
(Folio 2r) Sello segundo, seis reales, años de mil setecientos y setenta y dos,
y setenta y tres.
Señor rector del Colegio Real Mayor de nuestra señora del Rosario= Don
Luis Javier Jimenez Colegial formal de el presento a los pies de s señoria, con
mi mayor respeto y como mas haya lugar en que hecho digo: que para efectos
de que me convienen, se hace servir su acreditada justificación mandar que el
secretario de ese Colegio, me de testimonio de las informaciones, que produce
para servir la veca, en que el excelenisimo Señor Virrey, se digno nombrarme que
si es Justicia= Assia rendidamente suplico se sirva proveer como solicito yo Luis
Tadeo Jimenez y Barragan=Santafe tres de Agosto, de mil setecientos(folio 3r)
que el Secretario de este Colegio, certifique en manera que haga fee, si consta
en el Archivo de su cargo, haver yo usado de una de las Becas Seminarias de el,
y si para ello hice contar mi mi legitimidad, limpieza y nobleza de Sangre como
tambien, ser oriundo de la Villa de Honda, de donde son vecinos, mis Padres=
Y que asi mismo certifique si consta que yo fuere expulso de este colegio, o
hiviere dado motivo para ello lo qual mediante assia. Rendidamente suplico
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