Como ser un
BUEN JEFE
cuando la economia va mal
POR ROBERT I. SUTTON,
stos son tiempos dificiles para todas los jefes que conozco.
El miedo y la paranoia se han desatado en todas partes, no
slo en los mercados financieros, sino también en los luga-
res de trabajo, Hace unas semaris, untexhaustoejecutivu Ue
tuna firma de servicios profesionales me cont6 lo doloroso
«que habia sido tener que despedir a 10% de sus empleados
1 lo dificil que Ie estaba resultando roconfortar ¢ inepirar
al resto de los empleados. Cuando le pedi a un amigo en
LA IDEA
EN SINIESIS
bbuen trato, los jefes se han visto obl
dos. blandir el hacha. NetApp, nimero
tuno en el ranking de “Las 100 mejores
empresas para las cuales trabajar” de
Fortune, en 2009, anuncié que tba a des-
pedir a cerca de 6% de sus empleados a
‘menos de un mes después de que salié
cl ranking. Google, que en 2008 ocups
cl primer puesto en ese mismo ranking,
hadespedido a cientos de empleados de
Liewpy wnipleto.¥ Iasolas de despidos
‘no son la inica razén por la cual éste es
tun pésimo momento para ser jefe. En
los lugares donde no ha habido recortes,
la gente sospecha que los habri, y ese
temor latente conlleva sus propios
‘vempos turbulent:
con el que he trabajado durante atios,
se sintié obligado a informar a sus em-
ppleados por escrito que no s6lo no ha-
bia planes de despedir a nadie,sino que
1 préximo ao la empresa contratarfa
a muchas més personas. Sin embargo,
dijo: “No importa lo que diga sobre Io
seguros que estamos, la gente sigue pre-
{guntandor zeusndo vendrin ls despidos?”Incluso en trabajos
todas ces seguros, hay decepciones menores pero no menos
reales: se reducen los salaros, os presupuestos se encogen y
los proyectos se postergan.
En consecuencia, la mayorta de los jefes -al igual que us-
ted, tal vez~esté operando en un terreno dificil y a veces des-
conocido, Poseedores de habilidades y enfogues perfecciona-
slos durante un largo periodo de crecimiento en las emprera5,
hoy sus roles son definidos por una pregunta inesperada:
444, Harvard Business Feview | Junio 2009
Nos féci sa joe en una des
‘sceleracion.Suimpuso natura y
‘comprensite, es anfocarse en sus
preceupacionas, per sus suberdina-
des chservan cada movimiento swo
en busce de sfeles sobre su destin
Usted debe repensar sus resoen-
sbiidades on terinos de lo qua sus
‘emloados pocfan necestar mas en
comprensién dla stuscion, sense
‘10ndo contoly sompasion
»» Alber que ls tiempos aii:
‘sean monos traumaticos, usted
prepareraa su organizacién para que
‘rezea cuando mejoren las concico-
nes exteras,y s0.ganalaletad de
Indviduos que permanecerén en su
red en los es por ven
2Cémo gestionar a las personas cuando
€l temor esté en el aire, la confianza
‘std debilitada y parece que el camino
por delante seguird siendo pedregos0
durante varios kilémetros mas? Este n0
sel trabajo al que aspiraba la mayoria
de los ejecutivos y los jefes,y algunos no
estardn alla altura de las circunstancias,
Este articulo fue escrito para los que st
quieren estarlo: primero estableciendo
por qué ee tan difiell ser un buen jefe,
y después develando la esencia de 10
‘que hacen los mejores jefes durante los,
tiempos dros.
predicted,
Eltandem toxico
Seamos claros: nunca es fei ser un gran
jefe, incluso cuando la economia pros-
pera. La dificultad se debe, en parte, a
tuna dindmica funesta que surge natu
ralmente en las relaciones desiguales de
poder: La investigacién confirma lo que
‘muchos de nosotros ya sospechébamos:
las personas que obtienen autoridad s0-
bre otras tienden a volverse més egocén-
tricas y menos consideradas respecto de lo que necesitan dicen
‘y hacen los demas. Como sino fuera suficiente,el problema se
exacerba debido a que las palabras y las acciones autocentra-
das de jefe son escudrifiadas constantemente por sus subor-
dlinados. juntas, estas tendencias crean un tindem tdxico que
‘merece un estudio més detenide.
Para entender la primera mitad de esta dindmica ~que
Jo Jofes tienden a no ser conselentes de las parspectivas de
sus seguidores-, considere e] “experimento de las galletas"
putblicado por los psicélogos Dacher Keltner, Deborah H.
(Gmuenfeld y Cameron Anderson en 2003. En este estudio, va-
los equipos compuestos de tres estudiantes cada uno tenian
Ja mision de redactar un breve documento sobre politicas
ppblicas. A dos miembros de cada equipo se les asigné alea-
toriamente que escribieran el documento. El tercer miembro
debia evaluarlo y determinar cuénto pagarle acada redactor,
Jo que en la practica lo convertfa en el jefe. Treinta minutos
después de que empez6 la sesién de trabajo, se les entregd
un plato con cinco galletas, una pausa bien recibida que de
hecho constituia la esencia de! experiment. Se esperaba que
nadie se comiera la altima galleta del plato, nadie to hizo.
Un minimo de modales reprimen tal tentaci6n. Pero, zqué
‘pas6 con la cuarta galleta, la que podia tomarse sin negocia-
ign y sin causar incomodidad? Resulté que una sensacion de
poder, por leve que sea, tiene un efecto sustancial. Los*jefes”
no sélo tendieron a tomar la cuarta galleta, sino que exhi
bieron conductas “desinhibidas" al comer, masticando con la
bboca abierta y desparramando migas por todas partes.LA IDEA
EN LA PRACTICA
ACE UNOS ANOS, Robert Sutton dirgié un aller con las altos elecuivos
de Procter & Gamble, on ol que se hablé dela importancia de brindar alos
‘empleadas predictibidad, comprensién dela stuacién, sensacion de contol
'ycompasién. Resulté que ese marco se aineaba con lo que ells ys habian
faprendido con al cierte de elgunas plantas. John E. Pepper, ut, que en aquel
tentonces mrasidia el consejo de administracion de P&G, present6 un andls's
interno de los efectos que las acciones de i irecci tenian en la roductvi+
ed, a retencion de empleados que recibieron ofertas do travajo en ots ps
tes oe la empresa, y ventas en ss cudades donde nubo cieres, Los cites
de las piantas {uaron mucho mencs danas cuando os ejecutivos
‘Anunciaron a fecha de
ier sus hitos con
suficienteanticipacion, y
Oftecieen alos emplesdos
sfactadosiaposbiiisd de
bbusoa os cargos dentro
fn Gouna acuntente en la jerarquia, Las
sectetarias saben més de sus jes de lo que
{tos saben de elas los estudiantes de pos:
«grado saben mis de sus tutores que éstos de
ells”. Fiske explica: “Las personas prestan
atencidn a quienes tienen un control sobre
‘us destinos. En un esfuerzo por predecit
¥y ojala influr en su destino las personas
recopilan informacién sobre quienes tienen
poder” Ademds, la gente tiende a interpre
‘tar negativamente las acciones de sus jes.
Keltnery sus colegas informan que cuando
el jefe realiza una accion ambigua (una que
noesnitidamente ni uuena ni mala paralos
oe
argumentos de negocios pare el
terre oe la planta,
buscar en ovlado.
4
Explicaron detallads-
En ottas palabras, los ejectivas de P&G reconocieron al valor de
precictiblie, la cmprensign dela stuacén, la sensaci6n de contol yl
tee de un cambio organizacionl
Ccompasién en los momentos angus
Este simpitico experimento ilustra claramente un hallazg0
constante en muchas investigaciones. Cuando las personas ~it-
dependientemente de su personalidad~ tienen poder, su capa
cidad de imponerse sobre otros hace que: (1) se enfoquen mas
cen sus necesidades y deseos; (2) se centren menos en las neces: