CURSO DE DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD

SESIÓN Nº 1
La Personalidad

1.1. Concepto e Importancia de su estudio

En la actualidad, uno de los temas que más se están investigando dentro del ámbito
de la Psicología es el relacionado con el desarrollo de la personalidad, su influencia
en el éxito profesional y su variabilidad a lo largo del tiempo.

Se entiende que la Personalidad es la forma particular de ser de cada individuo. Es

decir, es nuestra propia individualidad, lo que nos diferencia y hace que seamos
únicos. Una segunda definición nos dice que la Personalidad es un patrón de
comportamiento, pensamiento, motivación y emoción distintivo y relativamente
estable que caracteriza a una persona a lo largo de la vida.

La cuestión de si la personalidad puede o no cambiar ha sido un tópico constante

discutido. En 1890, William James llegó a la conclusión de que, alrededor de los 30
años de edad, la personalidad de un individuo se ha hecho tan sólida como una roca,
y ya no volverá a ablandarse jamás. Sin embargo, la mayoría de los psicólogos no han
estado de acuerdo con la afirmación de James. Por ejemplo, Erikson (1963)
consideraba que los adultos maduran y cambian a medida que van pasando por
diferentes etapas. Igualmente, los psicólogos clínicos suelen partir del supuesto de
que los individuos son capaces de realizar cambios importantes que afectan a
muchos aspectos de sus vidas. Incluso algunos, como Mischel (1972), han propuesto
que la personalidad puede ser tan variable que puede cambiar de situación a
situación.

Pero, aunque está demostrado que la personalidad puede cambiar a lo largo de toda
la vida, hay determinados períodos en los cuales los cambios que se experimentan
son mayores y tienen más repercusión en la vida presente y futura de los individuos,
de acuerdo a los estímulos que va recibiendo. Por ello es muy importante estudiar el
tema de la Personalidad. En primer lugar, porque es fundamental que el profesional
se conozca a si mismo y establezca un plan de desarrollo de la misma para potenciar
todas sus capacidades y obtener el mayor provecho de ellas. Y en segundo lugar,
porque debe conocer cómo funciona la estructura de personalidad de sus
trabajadores, lo cual determina su comportamiento en la organización.

En este sentido, el hilo conductor del presente Curso de Desarrollo de la personali-

dad va a ser clarificar, en la medida de lo posible, cuáles son las características más
destacadas de la Personalidad de los individuos, a fin de que el profesional en
Administración pueda conocerse mejor a si mismo y a sus trabajadores y saber qué
puede hacerse para cambiarlas los aspectos negativos.

Siguiendo una clasificación tradicional dentro de la disciplina, se dividirá este trabajo

en dos partes claramente diferenciadas. Una de ellas estará centrada sobre los
distintos conceptos y elementos de la personalidad que se han propuesto
habitualmente. La otra versará sobre el análisis detallado de los factores
constitutivos de la Personalidad: físico, mental y afectivo, con el fin de que el
profesional en Administración pueda establecer criterios que guíen su desarrollo
personal y la relación con sus trabajadores.

1.2. Origen, factores constitutivos y Tipos de Personalidad (E-I)

Podemos afirmar que la Personalidad es la individualidad propia de cada ser
humano, su forma particular de ser, pensar y sentir. Cada ser humano es diferente y
tiene su propia personalidad.

1.2.1. Origen
La Personalidad se origina de tres herencias:

a) La Herencia Biológica
Que es aquella que recibimos de nuestros padres y que está compuesta de
capacidades y predisposiciones consignadas en nuestros genes. Esta herencia incluye
aspectos como el número de neuronas, el color de la piel, cabello y ojos, nuestra
estatura, etc. Nosotros no podemos escoger nuestra herencia de este tipo, pero en
algunos casos podemos modificarla artificialmente (color del cabello, etc.).

b) La Herencia Social
Que es aquella que recibimos del entorno o medio ambiente, a través de nuestro
permanente contacto con él. Desde pequeños recibimos estímulos de nuestros
padres, familiares, amigos, profesores y otras personas, además de las experiencias
que nos van ocurriendo.

c) La Herencia Personal
Que es aquella que nos vamos dando cada uno a nosotros mismos, a través de las
elecciones o decisiones diarias que efectuamos. Así, la persona puede elegir
libremente qué experiencias vivir o qué conocimientos introducir a su cerebro (en
otras palabras, cómo utilizar su tiempo), y determinar de esta manera su futuro.

1.2.2. Factores Constitutivos

La Personalidad posee tres Factores Constitutivos:

a) Factor Físico
Este factor incluye los aspectos orgánicos, los complementos que colocamos encima
del cuerpo y los comportamientos que desarrollamos. Es decir, el factor físico está
compuesto por aspectos que pueden ser captados o percibidos por los sentidos de
otras personas (vista, oído).
Los aspectos orgánicos corresponden a nuestro tamaño, color de piel, rasgos faciales,
color de ojos, contextura, etc.
Los aspectos de complementos incluyen vestimenta, calzado, joyas, pulseras,
correas, bolsos, etc.
Los aspectos de comportamiento se refieren a la forma de comportarnos, que
incluye lo que hacemos, lo que decimos y los gestos que expresamos.

b) Factor Mental
Se refiere a todos los procesos que se desarrollan en nuestra mente. Nuestra forma
de pensar, que incluyen nuestro sistema de valores, nuestra inteligencia, nuestros
conocimientos, formación y cultura. Este factor se expresa en nuestras opiniones y
decisiones.

c) Factor Afectivo
La afectividad es aquel conjunto del acontecer emocional que ocurre en la mente del
hombre y que se expresa a través de las emociones, los sentimientos y las pasiones.
Las emociones, son reacciones afectivas que surgen súbitamente ante un estímulo,
duran un corto tiempo y comprende una serie de repercusiones psico-corporales. Sus
principales características son su corta duración y elevada intensidad, además de
generar modificaciones fisiológicas significativas. Generalmente aparecen por un
estímulo en un contexto específico. Las emociones más comunes son: Miedo,
Aversión, Tristeza, Ira y Sorpresa.
Los sentimientos, son procesos afectivos relativamente estables adquiridos en
el proceso de la socialización, experimentados por seres humanos. Son profundos
porque amamos, adiamos, admiramos, envidiamos a personas relacionadas con
acontecimientos importantes en nuestra vida. Son relativamente estables; su
estabilidad es producto de la formación de un vínculo. Decimos que son adquiridos
en el proceso de socialización que está conformado por nuestras vivencias, por
ejemplo: el amor a nuestra pareja, el odio a nuestros enemigos, el cariño hacia una
profesora, el rencor hacia un familiar. Los sentimientos son subjetivos, surgen en
forma lenta y progresiva y finalmente, promueven conductas.
Las Pasiones Son procesos afectivos muy profundos de gran intensidad y que son
capaces de dominar las actividad personal del individuo. Se diferencia de las
emociones en que son estados de mayor duración. Las pasiones se subdividen en:
Pasiones Superiores. - Encaminadas al desarrollo personal y moral del individuo; son
valoradas por el grupo social. Ej. Pasión de la música por parte de Beethoven, pasión
de Einstein hacia la ciencia; pasión de Jesucristo.
Pasiones Inferiores. - Impiden u obstaculizan el desarrollo personal y social. Ej. Pasión
desmedida por el poder, la fama la riqueza de afanes individualistas y arribistas.
1.2.2. Tipos de Personalidad
Existen varias tipologías de la Personalidad. Una de las más conocidas y utilizadas es
la creada y difundida por Carl Gustav Jung en su obra Tipos psicológicos y definen
tipos psicológicos básicos en el marco de su teoría de la personalidad:
Las personas introvertidas muestran una actitud típica que se caracteriza por la
concentración del interés en sus propios procesos internos. Los introvertidos se
interesan principalmente por sus pensamientos y sentimientos, por su mundo
interior. Tienden a ser profundamente introspectivos. No se sienten atraídos por la
vida social activa, generalmente tienen pocos amigos y no gustan de asistir a
reuniones numerosas.

El extrovertido, por el contrario, desarrolla una actitud típica que se caracteriza por
la concentración del interés en un objeto externo. Los extrovertidos se interesan por
el mundo exterior de la gente y de las cosas, tratan de ser más sociables y de estar
más al tanto de lo que pasa en su entorno. Generalmente es notorio su apego por la
vida social activa, son muy amigueros y conversadores, mostrando una necesidad de
relacionarse socialmente.
Nadie es completamente introvertido, ni absolutamente extravertido. Sin embargo,
cada individuo tiende a mostrar una mayor inclinación por alguno de estos tipos de
personalidad. Si bien su personalidad puede ser con tendencia a la introversión o
extroversión, la persona puede actuar como si tuviese la personalidad opuesta,
porque piensa que en ocasiones es más apropiada la conducta introvertida, y en
otras la extrovertida. Las dos son mutuamente excluyentes. No se puede mantener
en forma concurrente una actitud introvertida y otra extravertida. Ninguna de las dos
es mejor que la otra. El ideal es adoptar la actitud que resulte más apropiada para el
sujeto, de acurdo a la actividad profesional que desempeñe.

1.3. Los Individuos – Semejanzas, diferencias, fingimiento

Si nos fijamos con detenimiento en las características de los individuos, concluiremos
en que todos somos diferentes, a pesar de que tenemos algunos rasgos comunes, los
cuales son de naturaleza genérica. Así, todos tenemos brazos (genérico), pero todos
los brazos tienen características diferentes (específico). Todos tenemos cerebro, pero
con diferente número de neuronas.
Una característica fundamental de los seres humanos, que dificulta su estudio, es su
capacidad de fingimiento. Esto hace que no podamos tener la seguridad de que lo
que dicen o hacen las personas, corresponda a lo que realmente piensan o sienten.
Es muy fácil fingir o engañar. Por ello, para conocer a una persona y su forma
verdadera de ser, es recomendable verificar la consistencia en el tiempo, entre lo
que dice y lo que hace el observado. A pesar de ello, siempre existirá un margen de
error, que limita el estudio de la naturaleza humana.
1.4. La única Ley de la Conducta Humana
Dado que las personas somos diferentes, difícilmente existirá una Ley que pueda
aplicarse a todos. Sin embargo, a la luz de la realidad, podemos enunciar una: “El ser
humano, siempre que actúa, lo hace para satisfacer un interés o una necesidad
personal”. Esta ley puede ser tildada de exagerada en cuanto a que muestra un
grado superlativo de egoísmo, es decir, que se afirma que las personas solo
pensamos en nosotros mismos, pero cuando la confrontamos con la realidad,
podemos determinar que se aplica en casi todo el accionar del ser humano.