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SEGURIDAD, SALUD Y MEDIO

AREA
AMBIENTE
CHARLA DE 5 MINUTOS
RESPONSABLE ELIANA CABRERA VALENCIA

APNEA DEL SUEÑO, FACTORES DE RIESGO Y SÍNTOMAS

Usualmente un
adulto sano en
reposo realiza
entre 12 y 20
respiraciones por
minuto a un ritmo
constante. La
interrupción de ese
ritmo con periodos sin respirar se llama apnea.

La apnea puede ser voluntaria, como cuando se contiene la respiración al sumergirse bajo el agua. Otras veces,
es involuntaria, como en el caso de la apnea del sueño.

El tipo más frecuente es la apnea obstructiva del sueño, consecuencia del cierre intermitente de las vías
respiratorias superiores (faringe e hipofaringe).

Factores de riesgo:

- Exceso de peso. Los depósitos de grasa alrededor de la vía aérea superior puede
obstruir la respiración. Sin embargo, no todos los que tienen apnea del sueño tiene
sobrepeso. Las personas delgadas desarrollan el trastorno, también.
- Perímetro del cuello. Una circunferencia de cuello mayor de 17 pulgadas (43
centímetros) se asocia con un mayor riesgo de apnea obstructiva del sueño. Esto es
debido a un cuello grueso pueden estrechar las vías respiratorias y puede ser un
indicio de exceso de peso.
- Presión arterial alta (hipertensión). La apnea del sueño es más común en personas
con hipertensión.
- Vía respiratoria estrecha. Es posible que haya heredado una garganta estrecha de forma natural. O bien, las
amígdalas o adenoides puede ser ampliada, lo cual puede bloquear las vías respiratorias.
- Ser hombre. Los hombres tienen el doble de probabilidades de sufrir apnea del sueño. Sin embargo, las mujeres
aumentan su riesgo si se tiene sobrepeso, y el riesgo también parece aumentar después de la menopausia.
- Ser mayor. La apnea del sueño se produce de dos a tres veces más frecuente en adultos mayores de 65 años.
- Antecedentes familiares. Si usted tiene familiares con apnea del sueño, usted puede estar en mayor riesgo.
- Uso de alcohol, sedantes o tranquilizantes. Estas sustancias relajan los músculos de la garganta.
- Fumar. Los fumadores tienen tres veces más propensas a tener apnea obstructiva del sueño que son personas
que nunca han fumado. Fumar puede aumentar la cantidad de inflamación y retención de líquidos en la vía aérea
superior. Probablemente este riesgo disminuye después de dejar de fumar.

CONFIDENCIAL: Prohibido reproducir sin autorización del Gerente General

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RESPONSABLE ELIANA CABRERA VALENCIA

Síntomas

La mayoría de las personas con este trastorno no saben que tienen este problema. Aunque sí pueden
sospecharlo ya que los ronquidos suelen ser tan fuertes que motivan la queja de quien comparte el dormitorio.

Estos sobresaltos suelen ser mínimos despertares que repercuten negativamente en la calidad de sueño,
y por ende causan somnolencia excesiva durante el día.

También en estos pacientes se pueden hallar alteración de los gases en sangre: disminución de la concentración
de oxígeno y aumento de la concentración de dióxido de carbono que afectan el funcionamiento cardiaco,
pulmonar, y de otros órganos. Durante los episodios de apnea se produce en el organismo una reacción de
alarma ante la falta de oxígeno con liberación de adrenalina que puede ser responsable de aumento de la presión
arterial, arritmias cardiacas, y trastornos circulatorios cerebrales.

El síndrome de apnea del sueño se ha relacionado con una mayor frecuencia de accidentes en quienes
conducen EQUIPOS MOVILES PESADOS Y LIVIANOS.
Las personas que roncan o saben que tienen apnea del sueño no deben fumar, beber alcohol ni
automedicarse con medicamentos para dormir.

Estrategias para prevenir los desórdenes del sueño

1. Cuida tu salud. Lo primero que debes hacer para prevenir las dificultades al dormir es alimentarte bien,
tomar mucha agua, evitar el estrés y mantener un peso adecuado.
2. Establece una rutina de sueño. Si quieres habituar a tu cuerpo a dormir como corresponde es
importante que fijes un horario determinado para acostarte y levantarte de la cama.
3. Evita las siestas. Si duermes la siesta durante el día te sentirás menos cansado a la noche y te costará
más conciliar el sueño.
4. Evita fumar, tomar alcohol y beber cafeína. Cualquiera de estos estimulantes te mantendrá despierto
toda la noche.
5. Ejercítate regularmente. Si bien debes evitar hacerlo poco tiempo antes de acostarte, se aconseja que
realices ejercicios físicos al menos dos veces por semana para mantener tu cuerpo saludable.
6. Evita las comidas pesadas a la noche. No comas alimentos difíciles de digerir durante la cena.
7. Crea una atmósfera adecuada. Apaga la luz antes de dormir, desconecta el televisor y el teléfono y
regula una temperatura ambiente adecuada.
8. Piensa una rutina antes de ir a acostarte. Leer, meditar o tomarte una ducha pueden ayudarte
enormemente a conciliar el sueño si lo haces regularmente.
9. Usa tu cuarto solo para dormir. De ser posible, no utilices tu habitación como oficina o lugar de juegos,
y resérvala sólo para cuando te vayas a acostar.
10. No te desesperes. Muchas veces es difícil combatir estos desórdenes de sueño. Si ninguno de estos
métodos te ayuda, no te desesperes y considera consultar con un especialista.

CONFIDENCIAL: Prohibido reproducir sin autorización del Gerente General

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