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OASIS, N°10

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Reseñas

LIBROS la creciente importancia que tienen los es-


tudios sobre la política exterior colombia-
Martha Ardila, Diego Cardona, Socorro na y latinoamericana, que hoy más que
Ramírez (Editores) Colombia y su política ex- nunca necesita ser analizada y valorada,
terior en el siglo XXI, 1ª. ed., Bogotá: Friedrich sobre todo cuando, como dicen Diego
Ebert Stiftung en Colombia –Fescol-, Fondo Edi- Cardona y Martha Ardila, “Colombia y
torial Cerec, 2005, 393 págs. su mundo externo no pueden escapar a
las dinámicas enunciadas y al hecho de que
En la Presentación de este libro, dice se requiere, cada vez más, un buen cono-
Wolf Grabendorff, director y representan- cimiento de ese mundo nuevo que nos han
te de Fescol que “los artículos que apare- dejado, entre otros, el fin de la guerra fría,
cen en esta publicación analizan, desde la redefinición hegemónica, los atentados
enfoques diversos y contando con autores del 11 de septiembre de 2001 y los avata-
expertos en sus diferentes campos, aque- res del conflicto interno por sí mismo y
llas materias de la agenda global que tie- en sus relaciones con otros temas álgidos
nen especial importancia en el ámbito de la agenda local e internacional”.
multilateral y en la política exterior bila- Nueve ensayos trae este libro, y éstos
teral del país, como son el conflicto co- se mueven “a medio camino entre lo na-
lombiano, la seguridad regional, los flujos cional y lo internacional”, de tal forma que
poblacionales, la integración, el medio “se vincula el conflicto interno o la pro-
ambiente, los derechos humanos, la polí- blemática de las drogas de uso ilícito con
tica contra las drogas y la cooperación. Ma- sus conexidades respectivas, con la políti-
terias, todas ellas que, entre otros aspectos ca internacional; pero también se exami-
fundamentales y ya tradicionales, marcan nan las tendencias de las relaciones
un punto de partida para reflexionar so- externas de los llamados nuevos y ‘más
bre los lineamientos que convendría asu- nuevos’ temas de la agenda en el contexto
miera la política exterior de Colombia, de la globalización; y se aprecian las mis-
contemplada como ineludible expresión mas relaciones interinstitucionales en los
democrática y bien público en el siglo ámbitos económico y político, con una
veintiuno”. aproximación que enfatiza lo interméstico
Así, pues, la serie de reflexiones reco- sobre lo puramente global”.
gidas en este volumen reafirma el valor y Los trabajos son: “El conflicto colom-

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biano: una perspectiva global”, de Alcides haber solución apropiada a los problemas
Costa Vaz; “Colombia: seguridad y polí- colombianos. Tampoco podemos esperar
tica exterior”, de Alexandra Guáqueta; que el Estado, y menos aún algún minis-
“Los nuevos flujos poblacionales y la po- terio, sea el responsable único y absoluto
lítica exterior colombiana. ¿Hacia una de nuestra relación con el mundo; sin
mayor interacción entre lo interno y lo ex- embargo, ello no significa, por supuesto,
terno?”, de Martha Ardila; “Integración y olvidar que existen caminos desbrozados
tratados de libre comercio”, de Edgar Viei- y mecanismos útiles y privilegiados de
ra Posada; “La política exterior ambiental comunicación con el exterior, como es el
de Colombia en el ámbito global”, de caso de las cancillerías”.
Manuel Rodríguez Becerra; “Hacedores de
paz y defensores de derechos humanos
(Una disputa de familia)”, de Iván Oroz-
co Abad; “Conflictos institucionales y cul- Jaime Eduardo Jaramillo Jiménez (Com-
turales en la formulación y evaluación de pilador). Cultura, identidades y saberes fron-
las políticas contra las drogas. Algunas re- terizos, Memorias del Congreso Internacional
ferencias al caso colombiano”, de Francis- Nuevos Paradigmas Transdisciplinarios en las
co E. Thoumi; “Encrucijadas en la Ciencias Humanas, vol. I, Bogotá: Universidad Na-
cooperación internacional en Colombia”, cional de Colombia – Facultad de Ciencias Hu-
de Socorro Ramírez; “Los instrumentos de manas 2005, 362 págs. (Colección CES).
inserción internacional y la política exte-
rior: hacia una diplomacia integral”, de Este primer volumen de las Memo-
Diego Cardona. rias del Congreso Internacional de Nue-
Como se puede ver, una verdadera vos Paradigmas transdisciplinarios en las
gama de aspectos que debemos conocer y Ciencias Humanas, celebrado en la Uni-
sobre los que es indispensable hablar y tra- versidad Nacional de Colombia en el
bajar. Y es que las propuestas de estos artí- 2003, reúne parte de las ponencias que
culos, como dicen sus editores, “tratan de tuvieron lugar durante el evento que como
mencionar los requerimientos de algunos dice el compilador “no estuvo alejado del
de los temas álgidos de nuestra política contexto sociopolítico en el que nos mo-
exterior, desde esa perspectiva intermésti- vemos, aunque la observación superficial
ca y actualizada. No se trata de las antipá- de los títulos de muchas ponencias podría
ticas políticas de poder, ni de la ingenuidad llevar a creer todo lo contrario. Los inte-
de quienes esperan toda solución única- rrogantes políticos -concebida esta noción
mente de manos de la comunidad inter- como la pregunta por la Polis, por las posi-
nacional; pero tampoco de la absurda bilidades de la convivencia, del logro de un
pretensión de pensar que sin ella podrá interés común, de la construcción de la de-
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mocracia- estuvieron siempre presentes en ciales del creer y creencias de las ciencias
esta verdadera asamblea académica”. sociales”, de Fabián Sanabria-S., y “Glo-
Este tomo tiene los siguientes capí- balización y catolicismos: la mirada desde
tulos: 1. Conferencias centrales, 2. Mente arriba y las relaciones cotidianas”, de For-
y cultura, 3. Etnicidad y ficción, 4. Los tunato Mallimacci.
estudios sociales de la religión: encrucija- El capítulo sexto, además de la pre-
das contemporáneas, 5. Los estudios de la sentación de María Elvia Domínguez, tie-
mujer y los estudios de género: debates ne cuatro interesantes ensayos: “El
actuales, y 6. Estudios culturales: retos y pensamiento feminista y los estudios de
perspectivas. género en los debates sobre la transdisci-
Las tres conferencias centrales fueron plinariedad”, de Juanita Barreto Gama;
“Transdisciplinariedad: notas para un “Notas para la historia del género”, de Au-
mapa de sus encrucijadas congnitivas y sus rora G. Morcillo; “Paradigmas y feminis-
conflictos culturales”, de Jesús Martín- mo”, de Martha López Castaño, y “La
Barbero; “Comprender críticamente nues- psicología social y los estudios de género
tras sociedades: pluralidad de paradigmas en el concierto de la transdisciplinariedad.
y nuevos temas de investigación”, de For- Retos latinoamericanos”, de Ángela María
tunato Mallimacci; “Antropología y psi- Estrada Mesa. En la última parte, Estudios
coanálisis. Posibilidades y límites de un culturales: retos y perspectivas, están, ade-
diálogo”, de Rita Laura Segato. más de la presentación de Fabio López de
En el capítulo Mente y cultura tene- la Roche, las siguientes ponencias: “El pro-
mos “‘Unos cuantos piquetitos’: violen- blema de las disciplinas científicas: entre la
cia, mente y cultura”, de Myriam Jimeno; epistemología y la ontología”, de Alberto
“Mente y cultura: subjetividad y política”, G. Flórez Malagón; “Antropología y estu-
de Yalile Sánchez; “objetos humorísticos dios culturales: retos y perspectivas”, de
gráficos: niño y mente. Esbozo de algu- Mauricio Pardo; “Estudios culturales y
nos desarrollos culturales del objeto hu- diálogos con la investigación en estudios
morístico y su relación con la cognición”, políticos, comunicación social y periodis-
de Rebeca Puche Navarro, y “La faceta mo”, de Fabio López de la Roche, y “Es-
social de lo mental”, de Jaime Ramos Are- tudios culturales. Construcción de
nas. En Etnicidad y ficción hay dos po- identidad y participación”, de Alejandro
nencias: “Cuerpos, trayectorias y lugares Jaramillo Hoyos.
del palenque”, de Ramiro Delgado Sala- Aquí tenemos el recorrido por el con-
zar y Andrés García Becerra, y “Etnicidad tenido de este novedoso y útil libro, como
y ficción en las metrópolis del nuevo mi- todos los de la Colección CES. Dice Jai-
lenio”, de Andrés Salcedo. En el cuarto me Eduardo Jaramillo, el compilador, que
capítulo otros dos trabajos: “Ciencias so- el lector “podrá observar como los textos

RESEÑAS
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aquí recopilados se hallan en la frontera Repensar Colombia, y que los extranjeros


del conocimiento internacional, en lo re- puedan encontrar información inicial que
ferente a las temáticas discutidas. Si se ha les facilite comprender en mejor forma la
hablado de una modernización cultural compleja realidad colombiana -y por ex-
tardía, de provincianismo y endogamia en tensión la latinoamericana- e incite a los
la vida intelectual colombiana, debe seña- estudiosos a profundizar en el tema”.
larse que esta condición ha comenzado a Para alcanzar los objetivos propues-
superarse en las tres últimas décadas, es- tos esta obra tiene nueve partes: 1. El pro-
pecíficamente en algunos centros acadé- ceso fundacional como nación
micos de punta y entre crecientes grupos independiente, 2. Entre la herencia colo-
de investigadores e investigadores en el nial y la modernización, 3. La constitu-
país”. Y luego agrega que el libro busca ción de 1991, 4. Conflicto y reforma
“reseñar las diversas intervenciones, con- política, 5. Los procesos de paz, 6. La nue-
textualizándolas y buscando vasos comu- va agenda: el “Plan Colombia”, 7. Inte-
nicantes, correspondencias, homologías, gración económica y guerra contra el
entre las diversas posiciones epistemoló- terrorismo, 8. Uribe: esperanzas y riesgos,
gicas y políticas esgrimidas en el evento”. 9. Barbarie o democracia. Con estos capí-
tulos el libro se convierte en una reflexiva
LFGN mirada al país, necesaria en todo momen-
to, pero especialmente ahora, cuando se
requiere un análisis juicioso y no produc-
Néstor Hernando Parra. Colombia dos si- to de las emociones, de las encuestas y las
glos en busca de gobernabilidad. Entre a demo- informaciones que se oyen todos los días
cracia y la barbarie, 1ª. ed., Bogotá: Aire Libre sin mayor confrontación ni seriedad.
Editorial, 2003, 326 págs. Y es que para el país “Es imperativo
transitar la vía social mediante reformas
Entre la democracia y la barbarie, es el económicas estructurales, y un modelo de
título que sugestivamente nos introduce desarrollo que corrija la tendencia concen-
en este libro que, como espera su autor, tradora y avance hacia la equidad, dando
sea “un aporte iniciador en la compren- máxima prioridad a la educación para la
sión integral del proceso político colom- democracia como eje central de la estrate-
biano, muchos de cuyos episodios he gia para la superación del ser humano y
vivido de cerca durante el último medio cauce obligado para la convivencia ciuda-
siglo. Abrigo la esperanza de que con su dana”. Así, que esta obra es un llamado a
lectura, los nacionales de todas las gene- estudiantes, profesores, intelectuales, po-
raciones, pero particularmente los jóvenes, líticos, hombres y mujeres, nacionales y
puedan hacer un repaso que los motive a extranjeros interesados en conocer a Co-
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lombia, de cotejar sus contradicciones dia- tados Unidos, quienes analizaron las for-
lécticas y descubrir las razones por las cua- mas diversas en las que el conflicto colom-
les se vive una profunda crisis de valores biano ha sido interpretado desde diferentes
éticos y de sentido nacional. países como un problema de seguridad”.
En la última parte del libro dice su Estos aportes al análisis académico y
autor que “Este reto tienen que asumirlo a la reflexión sobre temas tan diversos, y
como propio las nuevas generaciones. A vistos desde enfoques múltiples, permiten
ellas corresponde definir el modelo de So- un reconocimiento de las dificultades por
ciedad y de Estado que deseen construir. las que atraviesa el país en temas tan sen-
Misión y derecho reconocidos histórica- sibles como el de la seguridad y las rela-
mente a cada generación. Es también una ciones internacionales de Colombia. Así
obligación que les compete y que tienen lo podemos observar al repasar el número
que cumplir sin pedir permiso a nadie. Es de ensayos que trae en esta ocasión la Re-
su deber y su responsabilidad. Es la mis- vista y que tratan, desde diversas fronte-
ma que les compete a los jóvenes de los ras (y nacionalidades), “las implicaciones
demás países latinoamericanos, por lo que regionales de lo que comúnmente se ha
se insinúa la estrategia de asociación man- denominado como el ‘derrame’ de la cri-
comunada”. sis de seguridad de Colombia”.
Seis artículos tiene la sección Análi-
LFGN sis: 1. “La securitización de la crisis co-
lombiana: bases conceptuales y tendencias
generales”, de Arlene B. Tickner; “Perce-
pções no Brasil sobre o conflicto colom-
REVISTAS biano e de seus reflejos regionais e nas
relações bilaterais: uma visão preliminar”,
Colombia Internacional. Universidad de los de Alcides Costa Vaz; “Percepciones y di-
Andes - Centro de Estudios Internacionales - De- mensiones de la crisis humanitaria y de
partamento de Ciencia Política, núm. 60, julio/ derechos humanos en Colombia”, de Mar-
diciembre de 2004. cela Ceballos y Harvey Suárez; “Percep-
ciones hemisféricas sobre la crisis
Este número especial de Colombia In- colombiana: el caso de Ecuador”, de Pa-
ternacional, es “resultado del foro ‘Percep- blo Andrade A.; “La crisis colombiana y
ciones Hemisféricas sobre la Crisis Perú”, de Isaías Rojas-Pérez, y “Percepcio-
Colombiana’, realizado los días 21 y 22 nes venezolanas sobre la crisis de Colom-
de octubre de 2004”, en la Universidad bia”, de Miriam Kornblith.
de los Andes. Al evento asistieron “exper- En Nuevas perspectivas un ensayo de
tos provenientes de América Latina y Es- Giovanni Mantilla, titulado “Gobernar y

RESEÑAS
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asegurar: una lectura crítica de la seguri-


dad democrática en Colombia desde la fi- Estudios Políticos. Universidad de Antio-
losofía política de Michel Foucault”. En quia – Instituto de Estudios Políticos, núm. 26,
Coyuntura, aparece de Juan Gabriel Toka- enero/junio de 2005.
tlian “El momento proconsular: Latino-
américa después de la reelección de Bush”, María Teresa Uribe de Hincapié dice
y en Documentos, de Carla Poussa “Crisis en la Presentación de este número de Es-
colombiana: una perspectiva panameña”. tudios Políticos que “Como en tantos mo-
Son precisamente estas percepciones, mentos de la historia colombiana, otra vez
y las interpretaciones y estudios de espe- la sensación de los últimos meses parecie-
cialistas, muchos de ellos extranjeros, lo ra describirse mejor con la palabra vérti-
que permite un amplio reconocimiento de go. Un vértigo suscitado por los afanes
la evidente crisis que vive el país y que re- propios de un momento ya preelectoral;
quiere, precisamente, de otras miradas, de por las dudas y expectativas que genera
otras búsquedas que puedan conducir a un proceso de dejación de armas como el
juicios más precisos sobre la situación que de los últimos dos años; por la recurren-
enfrenta Colombia. Lo dice Pablo Andra- cia de múltiples reformas normativas que
de en su artículo sobre La securitización en cortos períodos de tiempo dan lugar a
de la crisis colombiana: “…se ha vuelto insospechadas mutaciones del orden ins-
un lugar común en muchos escritos sobre titucional como un todo; por los reaco-
el tema, afirmar que el ‘derrame’ produci- modos de los políticos de profesión y los
do por la crisis colombiana amenaza la amagues de disolución de sus respectivos
seguridad de la región, sin que éstos iden- partidos, movimientos o facciones”. Sin
tifiquen ni analicen de forma detallada los duda, ella interpreta con claridad el sentir
aspectos específicos que configuran dicha de buena parte de quienes se interesan por
amenaza”. los estudios sociales y quieren conocer e
interpretar la situación nacional e inter-
LFGN nacional.
Los artículos que aparecen en esta
ocasión nos permiten columbrar el inte-
rés de los expertos y de los estudiosos, al
tiempo que interesan a sus lectores en
nuevas dimensiones del análisis y la inter-
pretación de los fenómenos que vive el
mundo moderno. Así tenemos: “Moder-
nidad y libertad”, de Enrique Serrano
Gómez; “El derecho básico a la justifica-
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ción: hacia una concepción constructivis- to de fenómenos que dé cuenta de las rup-
ta de los derechos humanos”, de Reiner turas, como de las continuidades que exis-
Forst; “Pobreza y justicia económica en los ten entre ellos. Evidentemente aquí
contextos nacional y global”, de Francis- tenemos una amplia gama de posibilida-
co Cortés Rodas; “Derecho y política en des para dar un contenido a estos elemen-
el pensamiento de Bobbio: una aproxima- tos formales. Ninguna de estas
ción”, de Mario Montoya Brand; “La im- posibilidades puede desecharse a priori,
perceptible erosión del poder presidencial pero resulta esencial la elección de alguna
en Colombia”, de Pedro Medellín Torres; que no implique restringir la perspectiva.
“Prácticas hegemónicas de la coalición po- Se trata de una elección en la que se juega
líticamente dominante en Medellín y su la capacidad comprensiva y explicativa de
entorno urbano-regional”,de Vilma Lilia- la teoría que se quiere construir”. Así, Es-
na Franco; “Medellín entre la muerte y la tudios Políticos, abre espacios para el de-
vida. Escenarios de homicidios, 1990- bate académico, permite otras fronteras de
2001”, de Clara Suárez Rodríguez, Car- la interpretación de las realidades que vi-
los Giraldo Giraldo, Héctor García García, vimos y nos lleva a análisis críticos sobre
María López López, Marlene Cardona muchos temas de actualidad, que requie-
Acevedo, Carolina Corcho Mejía y Car- ren de diversas, de múltiples miradas.
los Posada Rendón, y “Raza y nación en
el pensamiento de Luis López de Mesa: LFGN
Colombia, 1920-1940”, en Álvaro Andrés
Villegas Vélez.
En buena medida, el artículo de En-
rique Serrano Gómez “Modernidad y li-
bertad”, se convierte en una propuesta de
análisis e interpretación de algunos de los
fenómenos que vivimos en este momen-
to: “Proponerse abordar el tema de la mo-
dernidad implica comprometerse con el
desarrollo de una narración histórica en
la que es indispensable establecer con toda
claridad dos elementos básicos. En primer
lugar, se requiere el contraste de dos mo-
delos (sociedad tradicional-sociedad mo-
derna, sociedades rudas-sociedades
civilizadas, o como se quiera denominar-
los), para, después, introducir un conjun-

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