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INVESTIGACION

Cesar alvarado

6 DE DICIEMBRE DE 2018
EXPRESION ORAL ESCRITA
La música andina es un término que se aplica a un conjunto muy amplio de ritmos,
estilos, sones, instrumentos e intérpretes que se encuentran a lo largo de
la cordillera de los Andes, que abarca desde el centro de Colombia, el sur de
Argentina y Chile, atravesando ecuador Perú y Bolivia, son muchos los que
equivocan el concepto de música andina por el hecho de que hoy en día se ha
tendido a comercializador cierto tipo de música editada por productoras y difundido
por los medios de comunicación, aunque esto obviamente no es con una mala
intención, debido a ello solo se conoce a nivel mundial una ínfima parte de la
riqueza de este tipo de música.
La música andina se remonta desde la época Preincaica donde las culturas como
por ejemplo Nazca, los Mochicas o Chimú entre otras culturas usaban la música
muchas veces como parte de sus ceremonias religiosas, para pedir por una buena
cosecha, etc. sus letras se basaban en la vida cotidiana y otras en ensalzar a sus
dioses y Apus, la música formaba parte de sus vidas por ello en muchas de
las excavaciones arqueológicas se encontraron instrumentos como bocinas,
sonajeros, flautas de pan, quenas o silbatos, tiempo después estos instrumentos
siguieron siendo utilizados en la época dorada de América Latina, el imperio
incaico o tawantisuyu, una palabra quechua que significa cuatro territorios, este
imperio comprendía desde la región del Cusco (Perú) hasta partes de Ecuador y
Chile, fue la época donde reinaban los incas y conquistaron muchas culturas.
HISTORIA

Los nombres de estos modernos ritmos devenidos de la antigua música Quechua


fueron puestos por españoles, la palabra Carnavalito -uno de los ritmos del Altiplano-
no existía. Se desconoce el nombre que los quechuas dieron a esos ritmos, si es que se
los dieron.

La palabra zamba puede tener diferentes orígenes y ser tanto una deformación de las
palabras; “bamba”= llanura y “Sambú”= calabaza (secada se usa como recipiente)
ambas de origen Quechua, como otras..., pero siempre fueron nombre pos-colombinos

Lo cierto es que ese ritmo primitivo, luego evolucionado –en el norte argentino- se
llamó “zamba” a partir de la llegada a América de los españoles.

Según los “musicólogos”, así catalogados por la WIKI, zamba deviene de “sambo” =
mestizo de africano y aborigen americano, (ejemplo; Hugo Chávez), y aquí otra vez
estamos frente a un caso similar al “tango”. Los nombres de esos ritmos son
posteriores a la conquista, pero los ritmos son mucho más antiguos y totalmente
autóctonos.

Las culturas sudamericanas tenían su música y sus instrumentos musicales muy


anteriores a llagada del europeo.
En las excavaciones de Caral , poblamiento arqueológico del 4000 AC, se descubrieron
una gran cantidad y variedad de flautas hechas de huesos.
Las culturas del altiplano y las culturas , Chavín, Caral,… y las culturas del litoral
atlántico; Tupínâ, Caraíbas y las amazónicas, consideraban, sin excepción, a la música
como una expresión espiritual, una ceremonia ritual y estaba dirigida, en el caso de las
culturas del altiplano (quechuas, aymaraes, etc.), a fuerzas telúricas; La Pacha Mama,
Inti, etc. a quienes invocaban en sus canciones y músicas pidiendo o agradeciendo.

Es evidente que al menos en América y África la música tiene un origen ritual,


espiritual, es una expresión comprometida con lo telúrico.
Ese fue el UNICO sentido que tuvo la música autóctona en toda Sudamérica. Distinto
al caso en Europa donde la música tenía un sentido de deleite, placer o uso castrense,
la música sacra vino después y fue una parte de la cultura musical, no un todo.
Instrumentación
HISTORIA DE LA ZAMPOÑA
La zampoña es uno de los instrumentos más representativos de las culturas
andinas. Ha cumplido y cumple un papel polivalente y está presente en todo tipo
de tradiciones, ceremonias, celebraciones, bailes, homenajes, etc. Existe una
enorme cantidad de variaciones y nombres de acuerdo con el tipo y uso que se les
da; las hay de una y dos filas de tubos, en forma de escalera, rectangulares o en
escalera alterna, de uso solista o colectivo, con bisel o sin bisel y con una gran
variedad en la cantidad de tubos. También hay de dos filas de tubos que combinan
cañas cerradas en su extremo inferior con cañas abiertas a manera de
resonadores, ya sea en forma de escalera, rectangulares, de uso solista y
colectivo.
Las antiguas culturas andinas han dejado su huella que es perceptible en la
actualidad no sólo por los descubrimientos arqueológicos y antropológicos sino por
las manifestaciones populares que muestran un pasado que hoy se hace evidente
en sus símbolos, significados y tradiciones
ORIGEN:
En el altiplano andino (zona de la cordillera de los Andes compartida por el Perú y
Bolivia, existían desde la época precolombina dos tipos de zampoñas nativas
llamadas siku o sikuri (en lengua aymará, en castellano significa "tubo que da
sonido") y antara respectivamente, que siguen siendo utilizadas en la música
folclórica.
El nombre «zampoña» es una deformación de la palabra española «sinfonía».
Probablemente haya sido como los indígenas del Alto Perú creían que se llamaba
la música de los conquistadores españoles.
La palabra «sinfonía» no significa "instrumento musical" (como sugiere el
Diccionario de la Real Academia Española) sino que proviene del latín simfonia, y
éste a su vez del griego "simultáneo" "que une su voz, acorde, unánime". La
zampoña no emite sonidos simultáneos o acordes, sino un sonido a la vez, por lo
que la definición en el diccionario de la RAE no es del todo apropiada.
En la Grecia antigua se conocía este instrumento con el nombre de siringa (en
griego, sirgos), en honor a la náyade Siringa una ninfa que el dios Pan trató de
violar y fue convertida en caña. También se la conoce como flauta de Pan. El
personaje Papagayo, de la ópera La flauta mágica de Mozart, toca una flauta de
pan de varios tubos.
5.7. LEYENDA:
Cuenta la leyenda que el dios Pan se enamoró de la ninfa Siringa que paseaba
por los bosques danzando y cazando con su arco. Un día, Pan la persiguió hasta
que el río Ladón se interpuso en su camino, pero la ninfa, viéndose amenazada,
pidió socorro a las náyades, quienes la transformaron en caña. Pan, muy
desconsolado, se percató de que el viento silbaba al pasar por la caña y pensó
que eran los lamentos de la ninfa. Decidió cortar la caña y unió los trozos con
cera; construyó así su siringa (flauta) para tocarla cuando la pasión y el deseo lo
poseían. Conservada en la caverna de Diana, después de la muerte de Pan, esta
flauta podía probar la virginidad de una muchacha por su sonido.
Cuenta la leyenda de aquel cañaveral, que un viejo campesino, de vuelta a casa,
pudo escuchar los sonidos del viento colándose en las cañas quebradas y
acariciando el oído con un sin fin de notas cual orquesta singular.
A la mañana siguiente, comenzó a construir un curioso órgano de viento
disponiendo caños en grupos de diferentes tamaños a lo largo de ese lado de la
loma donde el Dios de los vientos hacía patente su presencia meciendo las hojas
de las cañas y desgranando de ellas un dulce llorar...

Quena
POPULAR EN LA MÚSICA FOLCLÓRICA
Originaria del Tawantinsuyu, su empleo e influencia alcanzaron a Perú, Argentina,
Ecuador, Colombia, Bolivia y el norte de Chile. Es, además, el instrumento de
viento más antiguo que el hombre ha concebido en tiempo de la prehistoria.

LAS EVIDENCIAS

Las quenas más antiguas están en la cerámica mochica (costa norte del Perú) y
Nazca (costa central del Perú), ya que hay evidencias de origen Nazca, de sicus
hechos de cerámica y huesos de animales.

SU USO

La popularidad de su uso “moderno” en conjuntos folclóricos y uso tradicional en


las comunidades originarias de los Andes, la hacen uno de los instrumentos más
frecuentes en las fiestas regionales. Además, es indispensable su aprendizaje en
las escuelas por su valor cultural en nuestro país.

CLASES

Las quenas reciben distintos nombres según su tamaño y tonalidad. Encontramos


así aquellas que miden desde los 15 cm hasta las que alcanzan los 120 cm.
¿DE QUÉ ESTÁ HECHA?
Es tradicionalmente de caña cortada de bambú o madera y tiene un total de siete
agujeros: seis al frente y uno atrás. Ese instrumento tiene las características para
ejecutar cualquier tipo de melodía acompañado de toda clase de instrumentos,
como el violín, el charango, el piano y percusión.

EL DATO
La quena que se toca en Bolivia, Argentina, Perú y Chile presenta siete
perforaciones. Las posiciones de los dedos son más o menos las mismas en los
diferentes países
Charango

El charango nace de la modificación de un instrumento de cuerda de origen europeo en la


región altiplánica de los Andes durante la época colonial. Generalmente se menciona a
la mandolina como el instrumento en que se basó la confección del charango, pero también se
señala a la vihuela como la base para su construcción.
Si bien el proceso de creación del charango debe haber ocurrido durante el siglo XVI o XVII —
etapa tardía de la colonización española—, es del siglo XIX el primer registro que se tiene de
su uso.
Es así como en las portadas de varias iglesias del siglo XVIII, en el departamento de Puno
Perú (1,757), departamento de Potosí que hasta 1776 pertenecía a la Real Audiencia de
Charcas, aparecen figuras o imágenes del charango. El Inca Garcilaso de la Vega (1539-
1616) graficó en sus obras la utilización de este instrumento. En un documento escrito en el
año 1814 un clérigo de Tupiza, Bolivia, al referirse a los charangos, dice que son «unos
guitarrillos muy suyos, que por acá se llaman charangos». Torino, por su parte, ha ubicado
representaciones de sirenas tocando posibles charangos en algunas iglesias coloniales de
mediados del siglo XVIII en el altiplano boliviano y peruano, lo cual dataría al instrumento a
una fecha más temprana.
Durante el siglo XX aparentemente el charango solamente se tocaba en las regiones rurales, y
era muchas veces despreciado por los habitantes de las ciudades, considerado un
«instrumento de indios». En 1900 fue ingresando al ámbito urbano; en 1944 el boliviano Mauro
Núñez empezó a divulgar la música folclórica con charango y también a renovar la música de
este instrumento. Mauro Núñez también se dedicó a la construcción de charangos bolivianos.
Posteriormente se fueron creando unos estilos propios en la música andina hasta hoy.
Llevando el charango a las salas de concierto.
A partir del año 1950 Jaime Guardia empezó a difundir la música de charango de Ayacucho,
en el Perú, con mucho éxito.1
Tambien para la década de los 50 empezaría a difundirse con éxito la musica de charango
en Ecuador
En los años cincuenta y sesenta se empezó a popularizar el charango en Argentina y Chile, y
también en Francia y otros países europeos.
A partir de los años sesenta, músicos y grupos de Argentina y Perú (como Jorge Milchberg ), y
de Bolivia (como Ernesto Caviar)[1] con Los Jairas y los hermanos Arguedas (Bolivia
Manta), William Ernesto Centellas,2 Eddy Navia, con sus giras llevaron la música del charango
a toda Europa, los Estados Unidos y Japón.
En La Paz (Bolivia), el 6 de abril de 1973, bajo la iniciativa fundamental de William Ernesto
Centellas2 contando con la colaboración de Abdón Cameo y Ernesto Caviar Aramayo3 fue
constituida la Sociedad Boliviana del Charango que desde 1997, cada dos años organiza el
Congreso Nacional del Charango, junto al evento Encuentro Internacional de Charanguitas.
En Bolivia se reconoce a la ciudad de Potosí como lugar de origen "Cuna del Charango",
mientras que por su difusión histórica y contemporánea la población de Aiquile tiene el
designio de "Capital del Charango". Desde 1984, en Aiquile se realiza el festival internacional
del charango, que reúne a intérpretes y fabricantes nacionales e internacionales de este
instrumento.4
En el pasado, el charango era elaborado de madera y caparazón de armadillo. Actualmente, y
para no sacrificar estos animales, es elaborado de madera completamente o inclusive de
papel, con el propósito de evitar la extinción de los armadillos
Principales interpretes

Instrumentos En las regiones andinas de Bolivia, Perú, Chile y Ecuador los


instrumentos más característicos son las flautas de caña, de Pan (zampoña, siku,
antara, rondador) y rectas (quena, quenacho) normalmente acompañadas de
charango y bombo. En otras regiones andinas la instrumentación varía. Colombia
posee su propio estilo de música andina basado en instrumentos de cuerda: el
requinto (guitarra pequeña de registro alto para melodías), la guitarra, el tiple y la
bandola Intérpretes La música del altiplano andino gozó de fama mundial en los
años 60 y 70 del pasado siglo gracias al movimiento de cantautores de protesta
como los chilenos Víctor Jara, Quilapayún o Inti-Illimani, popularizándose en la
escena folk mundial e influyendo a músicos de otras latitudes como Simon &
Garfunkel. Ejemplos de ello son la melodía de la canción The Sound of Silence y,
sobre todo, la versión de El Cóndor Pasa, ambas del mencionado dúo. Hoy la
música andina, tras su reconocimiento y difusión dentro y fuera de sus fronteras,
sigue siendo reivindicada por artistas como Los Kjarkas, Savia Andina, Wayanay
Inka, Alborada, Illapu, Inti-Illimani o Los Calchakis
Conclusión
La música de cualquier género es la expresión el sentir el pensar del interprete en
el momento de la ejecución el sentimiento que quiera trasmitir alegría, paz, dolor,
tristeza cualquier sentir para trasmitir emoción
La música andina es volver a las raíces es volver a vivir eso es asociar una
canción con algún momento vivido alegre, triste pero al tocar esa melodía volver a
vivir ese momento a volver a ver a esa persona fallecida, a recordad momentos en
los que se era feliz
La música andina está en mí en las venas al empuñar mi instrumento (zampoña)
sentir que es parte de mí que se por accidente le doy un golpe me duele ama
porque he vivido tantas cosas tan hermosas con ellas es la que en mis momentos
triste siento como que me dice ven vamos a tocar una canción vamos a tocas
“montes punku” mi canción favorita la música es mi vida

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