El esposo que DIOS quiere

Necesitamos ser el esposo que DIOS quiere, no podemos llevar un matrimonio como el mundo,
necesitamos seguir en nuestro matrimonio con el patrón bíblico de un pacto que hicimos el día de
Casarnos.
1. Un hombre de pacto
Efesios 5:21-33
Sin abusarla, sin maltratarla.
Tu esposa debe ser tratada como vaso más frágil, de lo contrario nada de lo que hagamos
prosperara.
2. Ame a su esposa como Cristo a la Iglesia.
DIOS nos ama que dio TODO a su hijo por nosotros.
¿Estamos dando todo por nuestra esposa e hijos?
Estamos sacrificando nuestra familia por dinero, ego, fama u orgullo, o ¿estamos dando todo por
ellos? El ego destruye el amor de DIOS.

Lo más importante que podemos hacer por nuestros hijos es amar a su madre, hombres debemos
morir y ayudarles a nuestras amadas así como Cristo lo hace con nosotros.

Nosotros no merecíamos, NADA de Cristo y el hizo TODO por nosotros.

La teología se puede Reducir en una palabra “el nos Amo”
Dos reglas en el matrimonio:
1. Deja que tu esposo haga lo que quiera (en el buen sentido)
3. Sea un buen Oyente “Escuche”.
Salmo 91:15
Mateo 21:22
1 Juan 5:14
Cuando oramos el nos oye, cuando pedimos algo a DIOS el nos oye, El es nuestro ejemplo por
esto debemos Escuchar.
Escuchar requiere concentración, debes estar pensando lo que se dice, no estar pensando que le
voy a decir cuando termina o interrumpirla.
Escuchar es involucrarse en la emociones de tu esposa e hijos.
No tenemos la última palabra siempre.
Habla y oirás lo que ya sabes, escucha y aprenderás mientras creces.
Cuando no los escucha el refugio está en la televisión.
Tu hijo necesita escuchar tu voz, eso dijo Jesús.
“Cuando te equivoques di lo siento (te costara, pero debes hacerlo) y cuando se equivoqué
cállate la boca y deja la mirada de sabelotodo”.
4. Bendiga a sus hijos y esposa. Siendo predicador de su casa
Lo que declares sobre tus hijos será, DIOS hará lo que tu digas con tu boca sobre ellos.
Eres el predicador, el profeta y el rey de tu hogar.
DIOS te hace responsable a ti y no a tu esposa acerca de tus hijos.
Efe 6:4
Pro 10: 8 y 21
Mira los judíos son una población pequeña, pero muy exitosos porque todos los viernes son
bendecidos por sus padres.
Aquí tenemos que elegir que queremos sobre nuestro hijos, habla lo mejor sobre ellos (Palabra).
Debemos hablar y confesar lo mejor sobre nuestra familia.
5. Ore por su familia y para su familia
La oración crea intimidad, te haces intimido si ora con ellos.
Éxodo 33:11
Hechos 2:45 (oraron hasta llegar a un acuerdo)
Cuando un hombre ora por su esposa y para su esposa hay intimidad.
Sin intimidad espiritual, no habrá intimidad sexual efectiva.
6. Discipline a sus hijos
Puedes criar a tus hijos como lo dicen los sicólogos (Ley de la Jungla) o por la ley de la palabra.
Prov. 13:24
Si lo amas lo corriges.
Corrige a tu hijo ahora y lo libraras del infierno.
Prov. 23:13-14
El te dirá que sí, pero no morirá.
Puedes llorar ahora o más tarde cuando este en problemas, es tu elección.
Puedes enseñar a tu hijo en todo, no es verdad que ellos son voluntariosos puedes enseñarles
“Aun a que te respete”
Dale con la varita en el Glutius maximus hasta que su corteza celebrar diga quién eres tú, hay una
conexión directa entre cola y el Cerebro, créelo es así.
7. Ser un líder
Génesis 2:15
Cuidar: Vigilar o proteger
Adán fallo a no proteger el jardín y su esposa.
El pecado de omisión fue no actuar.
Hay personas que hoy no hacen nada por su Esposa e hijos, necesitamos ser líderes de nuestra
familia.
Nuestro hogar debe ser protegido o cuidado.
Debemos observar que hacen nuestro hijos, que juegan, donde están, aun el mejor concejo es que
los amigos vengan a casa.
Es mejor tener todos los juegos en tu casa y la suficiente comida para todos sus amigos, que luego
lamentar.
8. Alabe a su Esposa.
Prov. 31:28
Algunos a elogiar a su esposa se quedan cortos,
Pero si elogian al perro, o dicen mira mi auto “si es una chatarra”.
Pro 31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las
piedras preciosas.

El valor de la mujer es más grande que el de las piedras preciosas, eso dice la palabra.

Ellas no tienen precio, dile a tu esposa tú no tienes precio.

Con esto ocho pasos impactaras al mundo, no con tus palabras, sino, con tus hechos y sabiduría.