Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
Al etiquetar a una persona se hace por uno o un par de aspectos cualidades o, por
defectos, por características "x" atribuyendo una connotación generalizada a algo
positivo o negativo a lo que en realidad es, y en lo que respecta la psicología, se
clasifica a una persona en relación a un trastorno sin bases científicas producto
del desconocimiento del mismo. Es ahí cuando al encasillar a alguien, creemos
que esa persona es tal y cual la percibimos y que será así por el resto de su vida y
la hemos de tratar por lo que es. Se enfatiza que un comportamiento no define lo
que en realidad es una persona.
De igual forma, creemos que hay un patrón existente cuando se etiqueta a una
persona, si se analiza de forma profunda este fenómeno se puede observar que
hay un existente patrón de relaciones de poder, de tal forma que la persona que
etiqueta tiene o tiene varios grados más poder, independientemente si este es o
no es formal, lo cual a su vez implica, que la persona que ha sido etiqueta pueda
llegar a etiquetar a otra persona de que posee menos poder, esta forma de poder
se traduce en un determinado grado de influencia sobra que la persona tiene en la
comunidad o en la sociedad, siendo así que, la etiqueta adquiere mayor peso
cuando la designa una persona que tiene más poder sobre otro, aun así, esto no
implica que una persona pueda etiquetar a otra que tiene igual o menor poder que
otra pero el peso de la etiqueta será menor, en el resto del artículo se puede lograr
entender mejor nuestro punto de vista si se relaciona cada enunciado con el
análisis planteado.
Por tanto, se utiliza en cultura general la etiqueta como un adjetivo, para clasificar
a las personas en base a lo que considera normal o anormal, entendiéndose acá,
lo anormal como aquello que se sale de la normativa social, y la persona que
posee un determinado estatus sumado a un conocimiento superficial de la
categoría diagnostica se concibe asimismo como normal auto etiquetándose
implícitamente. y, por ende, se considera estar en la capacidad de clasificar a los
demás, o también basarse en rumores infundamentados tomándolos como ciertos.
Ante una alta demanda de servicios de salud mental, hay psicólogos que no están
realmente comprometidos con su ejercicio, realizando praxis inadecuadas sin
ninguna ética dañan a los y ante estos casos, el afectado difícilmente note el error
en primer lugar porque desconocerá sus derechos y los deberes a los que está
sujeto el profesional a causa de la poca importancia que se le da a la salud en
nuestra sociedad. Entonces debería ser un compromiso del profesional de saber
manejar toda aquella situación personal para no entorpecer el proceso
psicoterapéutico y dar así la garantía de poseer todas aquellas habilidades para
solventar la situación que perturba a su paciente.
A esto agregamos que dichos manuales son producto del estudio científico y cómo
podemos evidenciar están hechos para ayudar a los profesionales de la salud a
identificar los trastornos para poder ayudar a las personas que padecen algún
trastorno, por tanto, se fundamentan en lo científicamente comprobado, por lo que
son una fuente confiable, descartando así que el problema sean los manuales,
estos nos permiten el determinar las causas de las características que presenta y
en base a ello determinar la psicoterapia; se requiere realizar un estudio
exhaustivo de la persona para poder emitir un diagnóstico certero debido a la
complejidad de la psiquis, de igual forma se requiere estudiar todo aquello que nos
permita entender mejor la realidad humana.
Esto implica como requisito el tener las competencias necesarias para poder
emplear las categorías diagnósticas, por tanto, se necesita actualizar y estudiar
para poder emplearlas, si no se cree estar suficientemente preparado, se debe
remitir a otro profesional para no equivocarse. Por lo tanto, la causa es el mal uso
de los manuales diagnóstico y la popularización de sus categorías. Su uso
inadecuado es perjudicial para la salud mental del usuario pues es
contraproducente y en lugar de mejorar su bienestar, afectando su pensamiento y
la idea de tener cierto trastorno, su sentir y actuar, en su personalidad en general.
Se crea una idea errónea y se limita a "cierto trastorno". Por tanto, se reduce, se
etiqueta, se estigmatiza.
También suele darse el caso en que estudiantes las personas que eligen la carrera
en psicología, o que inicia a trabajar en el área clínica sin tener interés y
convicción, si no hay un interés o motivación por la carrera se traducirá en una
praxis inadecuada. Por lo que no hay empatía, o también personas que se
sobrestiman así mismas, por lo que se adjudica los problemas y se ignora los
problemas que se poseen. Se hace así un pobre análisis y se observa de forma
muy pobre la etiología de los problemas de las personas. Podría hasta hablarse de
una baja autoestima, ya que damos mayor relieve a los problemas de los demás
por miedo de no mostrar nuestras debilidades. El etiquetado puede iniciar entre
compañeros en forma de broma, en donde tiende a convertirse en un patrón de
conducta generalizada.
Como futuros psicólogos nos dimos cuenta que debemos de trabajar con nosotros
mismos primero, ya que pueden existir etiquetas incluso con nosotros mismos, las
cuales son consecuencias porque fueron inculcadas por personas significativas o
que poseen un cargo o rol importante, y esto puede repercutir en como ejerzamos
la profesión. Debemos entender que la forma en la que nos veamos a nosotros
mismos también va influir en cómo veamos a las demás personas. El etiquetado
se intensifica al ser realizado por un profesional de la salud mental, quienes deben
conocer el efecto negativo de estas, sabiendo que en realidad solo se diagnostica
aplicando la ciencia al realizar un estudio minucioso. También al sistema de salud
exige un diagnóstico desde la primera sesión y no solo es el sistema de salud con
sus fallos los que permiten que el psicólogo sea susceptible a etiquetar arraigando
como característica particular de cada individuo y es acá donde comienza a verse
como "el mejor método de hacer el diagnóstico".