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CRowdfunding: financiación alternativa a los bancos

Financiación masiva
Pau A. Monserrat
Lunes, 04/05/2015 - Actualización 11/06/2018
El micromecenazgo (en inglés crowdfunding), también denominado financiación
masiva, es la cooperación colectiva llevada a cabo por personas que realizan una
red para conseguir dinero u otros recursos. Se suele utilizar Internet para financiar
esfuerzos e iniciativas de otras personas u organizaciones.
El crowdfunding puede ser usado para muchos propósitos, desde artistas
buscando apoyo de sus seguidores para publicar un álbum o hacer una gira,
campañas políticas, financiación de deudas, compra de una vivienda, escuelas,
dispensarios y hasta el nacimiento de compañías o pequeños negocios.

Por tanto, las características básicas del crowdfunding son:


 Una alternativa de financiación de multitud de proyectos personales, sociales o
empresariales, al margen de los circuitos financieros tradicionales. Es una
competencia a la banca en determinados casos y cantidades.
 En sus orígenes, era fundamental la idea de cooperación entre personas, si bien
nada impide el crowdfunding entre empresas u otros agentes del tráfico jurídico.
 La cooperación puede ser en dinero u otro tipo de recursos.
 El desarrollo de Internet es esencial para este tipo de financiación bancaria, al
permitir la desintermediación en la captación de ahorro para canalizarlo a la
inversión y demás finalidades.

Tipos de crowdfundings:
 Basados en donaciones: Quienes hacen aportaciones monetarias no esperan
beneficios de la transacción.
 Basados en recompensas: Quienes hacen aportaciones monetarias esperan una
recompensa a cambio de su contribución. Por ejemplo, un autor de un libro que a
cambio de una cantidad de dinero para poder publicar su obra, ofrece un ejemplar
firmado del libro.
 Basados en acciones: Se invierte en masa en una empresa y se recibe acciones o
participaciones de la misma.
 Basados en préstamos: Se financia en masa (con préstamos o créditos) a una
empresa a cambio de un tipo de interés (Crowdlending). Es decir, el usuario aporta
un dinero que se da, juntando el de otros pequeños inversores, a una empresa
( peer-to-business lending o p2b Lending) o particular (en este caso, de préstamos
en masa a particulares, se habla de peer-to-peer lending o p2p lending), en forma
de préstamo, que devuelve con intereses. Los pequeños inversores van recibiendo
el capital y los intereses que les corresponden.
 Basados en royalties: Se invierte en un proyecto o empresa y se espera una parte
simbólica de los beneficios.

¿Son sinónimos Crowdfunding y préstamos p2p?

No son sinónimos, sino que el p2p es un tipo de crowdfunding que consiste


en un conjunto de personas que dejan su dinero, de fome conjunta, a otra
persona. Se junta el dinero de los pequeños inversores para financiar a
una persona, para comprarse un coche o unficar sus deudas, por ejemplo.

¿Cómo regula la reciente Ley de Fomento de la Financiación Empresarial el


fenómeno del Crowfunding?
La Ley 5/2015, de 27 de abril (ver en BOE), de fomento de la financiación
empresarial, regula un tipo de crowdfunding, no todo el fenómeno.
Concretamente regula el crowdfunding en el que el inversor espera recibir
una remuneración dineraria o acciones-participaciones en la empresa.
Quedan fuera los tipos de micromecenazgo basados en compraventas o
donaciones, por ejemplo. Nos dice el preámbulo de la Ley:

"Las plataformas de financiación participativa ponen en contacto a


promotores de proyectos que demandan fondos mediante la emisión de
valores y participaciones sociales o mediante la solicitud de préstamos, con
inversores u ofertantes de fondos que buscan en la inversión un
rendimiento. En dicha actividad sobresalen dos características, como son
la participación masiva de inversores que financian con cantidades
reducidas pequeños proyectos de alto potencial y el carácter arriesgado
de dicha inversión. Si bien podría pensarse que son pequeños inversores
los que financian por acumulación proyectos en estas plataformas, las
experiencias internacionales apuntan a que los inversores profesionales,
aquí denominados inversores acreditados, apuestan también por los
proyectos de financiación participativa, prestando las plataformas que los
publican un útil servicio de filtrado de proyectos potencialmente viables."

En relación a los proyectos basados en préstamos, no se permite


incorporar una garantía hipotecaria sobre la vivienda habitual del
prestatario. Por tanto, el p2p y demás fórmulas basadas en préstamos, no
pueden pedir hipotecar la vivienda habitual. Eso limita el acceso a muchas
familias a la financiación hipotecaria de crowdlending, para basarse en
préstamos personales (o hipotecar una segunda residencia, por ejemplo).

Se busca que las Plataformas de Financiación Participativa (PFP) no


puedan asesorar a los inversores en relación a los proyectos en los que
invertir, prohibiendo la norma "Realizar recomendaciones personalizadas
a los inversores sobre los proyectos de financiación participativa."

Antes de acudir a un portal que ofrece los servicios de crowdfunding, hay


que ir a la web de la CNMV y comprobar que la empresa está debidamente
registrada. Este registro está previsto que funcione en los próximos
meses.
Fernando Zunzunegui, reputado abogado y experto independiente de este
portal, analiza de forma crítica la regulación, comentando en este artículo
publicado en El País que:
"Las denominadas Plataformas de Financiación Participativa deben
registrarse en la CNMV. Deben ser sociedades con un capital mínimo de
60.000 euros que puede llegar hasta la exigencia de 2 millones de recursos
propios, dependiendo del volumen de proyectos que gestionen. Hay límites
tanto para las inversiones como para los proyectos. Los inversores
minoristas no acreditados como profesionales sólo pueden invertir por esta
vía 3.000 euros por proyecto y 10.000 euros al año en todas las plataformas.
El importe máximo de los proyectos es de 2 millones, cuando van destinados
a los minoristas, y de 5 millones cuando van dirigidos en exclusiva a
inversores acreditados como profesionales."
¿Qué plataformas de financiación entre particulares funcionan y con qué tipo
de oferta crediticia?
Algunas de las plataformas que operan en estos momentos son:
 Comunitae, nacida en España en el año 2010. Se pueden pedir prestados de 3.000
a 15.000 euros. El mínimo por inversor son 50 euros. La rentabilidad que anuncian
va del 5% a más del 10%.
 Arboribus, plataforma de p2b, que "permite que personas individuales puedan
invertir directamente en pequeñas y medianas empresas que han demostrado ser
solventes durante años. Como consecuencia, estas empresas tienen una alternativa
a la financiación bancaria tradicional." Comunica rentabilidades medias del 7,8%
y préstamos de entre 10.000 y 150.000 euros, con plazos de hasta 60 meses. Nos
comenta que la deuda no aparece en CIRBE, cosa que ya nos da una pista de lo
que hay que hacer para mejorar los créditos responsables: añadir esta información
de endeudamiento a un registro accesible para las entidades financieras.
 Lendico, una startup alemana perteneciente a Rocket Internet.
 Zank, empresa registrada en Barcelona. La mejor catagoría, la A, ofrece un 10%
de interés.
 Bondora, de origen estonio y antes llamada isePankur. En la mejor categoría de
préstamo, la rentabilidad media que obtienen, según su portal, es del 13,18%.
Hay que esperar a ver si todas estas plataformas online se adaptan a la nueva
Ley o desaparecen algunas y surgen de nuevas.

Como norma general, no admiten clientes con Asnef o impagos varios.


¿Cuáles son sus principales riesgo?
El principal riesgo para el inversor minorista es que presta un dinero a un
usuario que no conoce ni ha evaluado personalmente. Es la plataforma de
financiación participativa la que filtran los proyectos personales o
empresariales. Por tanto, se deja dinero con la confianza de que se
devuelva, pero es posible perder la inversión si el prestatario no devuelve el
crédito. Otros riesgos a tener en cuenta, que nos explica BBVA, son:
 Riesgo operativo: se refiere a la posibilidad de sufrir pérdidas por fallos en los
procesos, en la información, en los sistemas internos de la plataforma, así como
pérdidas ocasionadas por errores humanos o por las consecuencias de
acontencimientos externos a la operación que afecten al proceso de la misma, como
por ejemplo los riesgos de reputación.
 Falta de coordinación en la regulación del Crowdfunding entre países, con las
consecuencias que pueden darse en operaciones transfronterizas o con clientes de
diferentes nacionalidades.
La financiación alternativa, un sector que empieza a caminar con paso firme en
España, pero cuyo camino por recorrer es aún muy largo, como explico en la
siguiente entrevista en la sección de finanzas personales de Cierre de Mercados:

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