EL SALARIO

Probablemente una de las categorías de la Economía Política

más importantes pero quizás menos estudiada, es la del Salario.
La importancia del presente tema es hacer conciencia dentro
de estudiantes, profesionales y todos los sectores que viven del
salario y que se desenvuelven en el proceso lógico del sistema
capitalista. Así como todos los desposeídos de medios de
producción o medios de vida propios y que en dicho sistema se
ven obligados a vender lo único que poseen: las energías
síquicas o mentales o físicas cuando aún quedan.

ESENCIA DEL SALARIO EN LA ECONOMÍA CAPITALISTA

Uno de los aspectos más controvertidos, lo constituye la esencia
del salario aunque la economía vulgar y sus seguidores sigan
explicando la categoría salario como el precio del trabajo.

Esta explicación del salario como precio del trabajo incluso se

nos presenta así en su forma del fenómeno pues si examinamos
la relación social entre el empleados o capitalista y el
trabajador notaremos que la acción o función del trabajo del
hombre, se paga después de su ejecución y cuando de la
función o acción del trabajo se deduce una cosa concreta: un
producto, sacamos la conclusión de que el salario pagó aquella
cosa.

La razón radica en que para la personas, las cosas se presentan

en su forma fenomenal y no en su esencia; es decir, la forma y
no su contenido en consecuencia, de aquí saca sus propias
conclusiones, sin embargo, no solo deben considerarse los
elementos de carácter histórico que han determinado ciertas
condiciones de las personas, que no se dieron en otros estudios
superiores, o sea, que el esclavo y el siervo, aun teniendo
relaciones sociales de explotación, el carácter de estos no son
iguales a las que se producen en el modo de producción
capitalista, aunque cuando en su esencia son de explotación,
en su forma de manifestarse tienen rasgos distintos.

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Es el caso del esclavo, este era propiedad absoluta del
esclavista; es decir, era una cosa más y el esclavista
determinaba toda su existencia; en el caso del siervo, sus
situación como trabajador forzado no varió sustancialmente de
la del esclavo, aunque tenían cierta “libertad”, pero siempre
sometido a la voluntad del señor, ya sea por su relación con los
medios de producción o bien por la protección que este le
proporcionaba o ambas situaciones; sin embargo en los casos
anteriores, el esclavo y el siervo había una dependencia directa
del esclavista y del señor.

Condición que no se da en el sistema de producción capitalista,

que primero determina que el hombre quede desposeído de los
medios de producción y sin ninguna sujeción al capitalista a no
ser la de un vendedor más, solo que vendedor de una
mercancía propia: la mercancía fuerza de trabajo, toda vez
que la razón de ser del sistema capitalista, no es simplemente la
creación de capital si no que la fuerza de trabajo se transforme
en mercancía y en consecuencia, deba ser vendida y
comprada en el mercado como cualquier país con sistema
capitalista, sea el grado que tenga dicho sistema.

Una ilustración práctica sobre esta realidad, puede tomarse en

el hecho de que cuando por primera vez tenemos que buscar y
obtener un trabajo, las consideraciones que se hacen, no es
que estemos o no capacitados para producir algo, es decir,
cierta habilidad y destreza, pero si es necesario contar con
ciertas facultades físicas para realizar aquella actividad.

Un ejemplo es: que si una persona, desconoce lo que es y para

lo que sirve una escoba, sea capaz de barrer, así sea mayor de
edad e incluso tenga varios años (40 años por ejemplo), pero si
desconoce lo que es y para lo que sirve una escoba, trabajo
aparentemente sencillo no podrá barrer.

Cualquiera, sea la extensión que se le pida que barra y este

mismo ejemplo pueda ponerse para otras actividades, o sea,

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cuando nos presentamos a una empresa o centro de trabajo
bajo el requerimiento de una plaza, tenemos que tener algunos
conocimientos (energía psíquica) así como habilidades y
destrezas (fuerza física) y esto será lo que ofreceremos en venta;
y también será lo que nos compren, condición que se dio en
otros modos de producción, pero que la historia es
suficientemente rica en tales informes.

En esta circunstancia, el transformarse la fuerza de trabajo en

mercancía, el hombre la vende como cualquier otro en
mercancía y por tal razón , el salario constituye el pago por el
valor de dicha mercancía o como lo señala la economía
científica: el salario no es lo que parece ser, es decía, el valor (o
el precio) del trabajo si no solo una forma disfrazada del valor (o
el precio) de la fuerza de trabajo, que bajo el sistema capitalista
representa una forma transfigurada de las relaciones de
explotación del trabajo asalariado por el capital.

FORMAS FUNDAMENTALES DEL SALARIO

Salario Nominal y Salario Real

El salario, como precio de la mercancía fuerza de trabajo o
como valor de cambio de esta, reúne rasgos específicos
diferentes de la dinámica de los precios de otras mercancías del
mundo capitalista.

Salario Nominal: Es la suma de dinero que el obrero recibe por la

venta de su fuerza de trabajo mensual, quincenal, semanal y
otros.

Salario Real: Esta representado por la cantidad de bienes

materiales y de servicios que pueden ser obtenido por el salario
en dinero. (por ejemplo productos de la canasta básica,
transporte y otros). Para cuanto le alcanza.

En estas circunstancias, el salario Real constituye uno de los

instrumentos más eficaces para medir el nivel de vida de los

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asalariados, pues representado el único ingreso que obtiene el
vendedor de fuerza de trabajo de su salario depende
íntegramente sus condiciones de vida; así si se eleva el salario
nominal, pero en la misma o en mayor proporción se elevan los
precios de las mercancía necesarias para sus subsistencia, se
dirá que el Salario Real bajó. Y por el contrario (casos muy
especiales), puede ser que no se modifique el salario nominal
pero que el precio de las mercancías bajen diremos que hay un
aumento del salario Real.

Se indicaba en el párrafo anterior, que solo en casos muy

especiales probablemente en forma estacional, puede
producirse una elevación del salario real o que mejoren las
condiciones de compra del vendedor de fuerza de trabajo, por
una mayor posibilidad de adquirir mercancías, pues la
tendencia general de la producción capitalista no es elevar el
nivel medio de los salarios, si no, por el contrario, hacerlos bajar.

Para el caso se señalan algunos de los medios de los cuales se

vale el sistema capitalista para influir en una tendencia a bajos
los salarios nominales y en consecuencia deteriorar las
condiciones de vida del asalariado.

1. Constituyendo la fuerza de trabajo la única fuente de

subsistencia del trabajado, este se ve obligado a venderla,
que no puede esperar a que surjan condiciones más
propicia para la venta de su mercancía, fenómeno que
establece la ausencia de un verdadero desempleo en
países capitalistas que no tienen susidios al desempleo con
es el caso de Guatemala. Por eso se dice que muchas
veces las autoridades tienen razón al señalar bajos índices
de desempleo, cuando si son notorios los índices de
subempleo, aun admitiendo que en el país se llevan
estadísticas sobre desempleo y subempleo, lo cual es
totalmente falso. El subempleo se da cuando una persona
capacitada para una determinada ocupación, no está

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 ocupada plenamente, sino que toma trabajos menores en
los que generalmente gana poco.

2. Bajo el capitalismo siempre existen un ejército de reserva

de mano de obra compuesta por los desocupados o
subocupados. El paro forzoso crea en el mercado del
trabajo una situación en que la oferta de fuerza de trabajo
como mercancía es siempre superior a la demanda.
Subocupados: son lo ocupados que trabajan menos de 8
horas diarias por causas involuntarias y desean trabajar
más horas o lo normal.

3. La inestabilidad en el trabajo es otro elemento influyente

pues mechas veces el asalariado debe acceder a trabajar
por una remuneración n menor por miedo a ser despedido.

4. La discriminación en relación a razas, sexos o edades

constituyen otra forma de disminuir los salarios, pues incluso
en nuestro país se tiene informes de que ciertos grupos
sociales de trabajadores semiproletarios o campesinos
pobres del altiplano guatemalteco, o trabajador
migratorio, se le pago menos que al trabajador calificado
como “ladino” , así mismo y esto es un hecho real, la fuerza
de trabajo femenino o de adolescentes y niños se les paga
menos que un hombre adulto, pudiéndose señalar
también desde este punto de vista, el hecho de no
contratar trabajadores arriba de ciertas edades.

5. En países capitalistas desarrollados como EE.UU. se

fomente el ingreso ilegal de personas, las cuales deben
trabajar por menores salarios y ocupaciones marginales o
indeseables por los nacionales o residentes.

6. El constante incremento del nivel de precios de las

mercancías que requiere el trabajador, representan otra
forma de presionar sobre los salarios, pues mientras los
precios se alzan, los salarios o permanecen estacionarios o
5
 se dan en menor escala representado siempre una bajo en
el nivel de vida del trabajador.

7. Los impuestos tanto directos como indirectos constituyen

otra forma descarada de reducción de los salarios pues se
sabe que los primero en cierta forma son trasladados al
consumidor y los segundos inciden desfavorablemente en
la masa trabajador que representan la mayoría de
tributarios de un sistema capitalista.

8. En sociedades como Guatemala el Estado limita la

organización sindical e incluso hace uso de la fuerza
pública para cualquier reclamo salarial reproduciendo
formas imperantes de explotación, bajos salarios y bajas
condiciones de vida tanto en el campo como en la
ciudad.

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 SALARIO POR TIEMPO Y SALARIO POR PIEZA O DESTAJO

Salario por Tiempo: Esta forma de salario es la que se aplica cuando el

pago depende de la cantidad de tiempo trabajado; horas, días, semanas,
quincenas o meses. La retribución de acuerdo con el tiempo trabajado
expresa la esencia del valor de la fuerza de trabajo.

Conviene al examinar el salario por tiempo, esclarecer que existe una

diferencia entre la categoría “valor del trabajo” y “precio de trabajo” toda
vez que esto ha sido objeto de discusión por lo que ahora se puede decir
que “valor del trabajo” representa el valor de la fuerza de trabajo “el
precio del trabajo” es el consiente de dividir el valor diario de la fuerza de
trabajo por el número de horas de la jornada de trabajo.

Con un salario inalterable (Q90.00) y con una jornada laboral cambiante

(12, 10 y 8 horas) el precio de trabajo de una hora variara en razón inversa
a la duración de la jornada; cuanto más corta sea la jornada de trabajo
tanto más alto será el precio del trabajo; y cuanto más larga se la jornada,
tanto menor será el precio.

𝑸𝟗𝟎.𝟎𝟎
Con una jornada de 12 horas = Q7.50 por hora
𝟏𝟐

𝑸𝟗𝟎.𝟎𝟎
Con una jornada de 10 horas = Q9.00 por hora
𝟏𝟎

𝑸𝟗𝟎.𝟎𝟎
Con una jornada de 8 horas = Q11.25 por hora
𝟖

Del ejemplo anterior se deduce que de acuerdo con la duración de la

jornada de trabajo, un mismo salario en metálico puede representar un
precio de trabajo por hora muy distinto.

El salario por tiempo permite al capitalista acentuar la explotación de los

trabajadores alargando la jornada, rebajando el precio de la hora de
trabajo y manteniendo inalterable el salario.

También puede darse que al incrementarse la intensidad del trabajo el

precio de la hora de trabajo disminuya, dado que se da la oportunidad de
una mayor producción, fenómeno que también ocurrirá con una mayor
productividad del trabajo.

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Es muy común que en ciertas etapas del producción (en periodos de
mayor demanda de mercancías), se intensifique la producción y el
capitalista establezca las horas extras, que constituye una forma de
prolongación de la jornada de trabajo, incrementándose también la
productividad.

Situación similar se da con el establecimiento de jornada única, pues si

bien es cierto que se disminuye la jornada de trabajo anterior, los tiempos
perdidos son menores y aumenta la intensidad y productividad del trabajo,
toda vez que el trabajador no tendrá que reiniciar la producción, sino que
simplemente corta temporalmente esta y luego la reinicia.

Debido a las características que impone el salario por tiempo, desde el

aparecimiento del sistema capitalista de producción, ha sido una de las
demandas más importantes de la clase trabajadora, la disminución de la
jornada sin disminuir el salario, lo que dio origen en su época, a la
celebración del 1 de mayo, que determina el sacrificio de varios
trabajadores de los Estados Unidos de Norteamérica, por conquistar la
jornada de 8 horas diarias.

Salario por pieza o destajo: El salario por pieza es simplemente una

transformación del salario por tiempo, del mismo modo que esta es una
trasformación del valor o del precio de la fuerza de trabajo.

El salario por pieza parece probar una primera vista que lo que se le paga
al obrero no es el valor de su fuerza, si no el del trabajo, ya realizado en el
producto, y que el precio de ese trabajo está determinado no como el
salario por tiempo si no por la capacidad del rendimiento del productor.

De acuerdo con la economía científica, el pago por pieza encubre

todavía mejor que el pago por tiempo la verdadera esencia del salario,
creando la apariencia de que al trabajador se le abona su trabajo.

Para fijar los precios que el capitalista ha de pagar por las piezas o tareas
señaladas al trabajador, se toma el salario medio la máxima cantidad de
artículos que produce el obrero más diestro y físicamente más vigoroso, de
tal modo, que se implanta así el precio más reducido.

Por otro lado, los trabajadores deseosos de ganar más, tratan de

sobrepasar la norma, haciendo un esfuerzo extraordinario, y cuando el
sobre cumplimiento se observa en un numero de operarios más o menos
considerable, los patronos se dan prisa a elevar el número de artículos a
fabricar y rebajan los precios de los mismos, debiendo el obrero volver a

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esforzarse para conseguir ganar, con los precios rebajados, lo mismo que
percibía antes.

El pago por pieza o destajo permite a los capitalista rechazar las piezas o
tareas asignadas a los trabajadores, con el pretexto de mala calidad, con
lo cual el salario sufre numerosas amputaciones.

El sistema de pago por pieza, adicionalmente a lo señalado anteriormente,

provoca la competencia y la rivalidad entro los trabajadores, lo que
contribuye con una mayor explotación e incluso al incremento de
desempleo o subempleo.

El sistema de salario por pieza tiene mayor aplicación en sociedades

como la guatemalteca, principalmente en las labores agropecuarias,
donde se dan una serie de inmoralidades y manipulaciones a los
trabajadores, fundamentalmente en las cosechas, que para el caso
de los cultivos principales en el país (café y algodón), al campesino
se le paga la recolección por peso.