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TEMAS DE

MEDICINA INTERNA
TEMAS DE
MEDICINA INTERNA
Tomo
2

DR. REINALDO ROCA GODERICH

Dr. Varan V. Smith


Smith Dr. Eduardo Paz
Presilla Dr. Jorge Losada
Gómez
Dra. Bertha Serret Rodríguez
Dr. Narciso Llamos Sierra
Dr. Ernesto Toirac Lamarque
Dra. María E. Noya Chaveco
Dr. Ricardo Morales Larramendi
Dra. Dania Cardona Garbey

4ta. edición

La Habana, 2002
Datos CIP-Editorial Ciencias Médicas

Roca Goderich, Reinaldo


Temas de Medicina Interna / Reinaldo
Roca Goderich, Varan V. Smith Smith,
Eduardo Paz Presilla... [y otros].
La Habana: Editorial Ciencias Médicas; 2002.
3t. 1815p. ilus.

Incluye bibliografía al final de cada parte.


Cada tomo tiene un índice.
ISBN: 959-7132-82-6
959-7132-84-2

1. MEDICINA INTERNA 2.EDUCACIÓN MÉDICA


3. LIBROS DE TEXTO I. Smith Smith Varan
V. II. Paz Presilla Eduardo.
WB 18

EDICIÓN: Zeila Robert Lora


Guadalupe Hechavarría Rivera
DISEÑO: Orlando Hechavarría Ayllón
COMPOSICIÓN: Virginia Pacheco Lien

El trabajo editorial fue realizado por la Editorial Oriente del Instituto Cubano del libro.

Primera edición, 1967


Segunda edición, 1975
Tercera edición, 1985

© Reinaldo Roca Goderich, 2001


© Sobre la presente edición:
Editorial Ciencias Médicas, 2002

Editorial Ciencias Médicas


Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas
Calle E No. 452 e/ 19 y 21, El Vedado
Ciudad de La Habana, 10400, Cuba.
Correo electrónico: ecimed@infomed.sld.cu
Fax: 333063. Télex: 0511202
Telef: 325338, 324519 y 324579
AUTORE
S

DR. REINALDO ROCA GODERICH


Director del libro. A cargo de las secciones de enfermedades cardiovasculares,
renales y de geriatría.
Dr. en Ciencias Médicas. Profesor de Mérito. Profesor Titular y Consultante de
Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de
Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna del Hospital Provincial
Clini- coquirúrgico Docente Saturnino Lora. Jefe del Departamento Docente de
Ciencias Clínicas del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Dr. Varan V. Smith Smith
A cargo de la sección de enfermedades infecciosas.
Dr. en Ciencias Médicas. Profesor de Mérito. Profesor Titular y Consultante de
Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de
Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna de la Facultad de
Medicina No.1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de
Cuba.
Dr. Eduardo Paz Presilla
A cargo de las secciones de enfermedades del sistema nervioso, reumáticas y del
colágeno, e inmunológico y alergia.
Profesor Auxiliar y Consultante de Medicina Interna del Instituto Superior de
Cien- cias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en
Medicina In- terna del Hospital General Santiago, Santiago de Cuba.
Dr. Jorge Losada Gómez
A cargo de la sección del sistema hemolinfopoyétiico.
Profesor Titular de Laboratorio Clínico del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Hematología y Jefe del
Servicio de Hematología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora
de Santiago de Cuba.
Dra. Bertha Serret Rodríguez
A cargo de las secciones de bioética, genética y atención primaria.
Profesora Titular de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna de la
Facultad de Medicina No.1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Profesora de la División de Estudios de Posgrado de la
Facultad de Enfer- mería de la Universidad Autónoma de Querétaro, México.
Dr. Narciso Llamos Sierra
A cargo también de la sección de enfermedades infecciosas.
Profesor Auxiliar y Consultante de Medicina Interna del Instituto Superior
de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en
Me- dicina Interna del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Ambrosio
Grillo de Santiago de Cuba.
Dr. Ernesto Toirac Lamarque
A cargo de la sección de enfermedades del sistema respiratorio.
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina
Inter- na del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago
de Cuba. Dra. María E. Noya Chaveco
A cargo de la sección de enfermedades digestivas.
Profesora Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias
Mé- dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina
Inter- na del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago
de Cuba. Dr. Ricardo Morales Larramendi
A cargo de las secciones de medio interno, de las intoxicaciones y de las
enfermedades por agentes físicos.
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina
Inter- na verticalizado en Medicina Intensiva y Urgencias. Jefe de Servicio
de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Sa- turnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Dania Cardona Garbey
A cargo de la sección de enfermedades del sistema endocrino y del
metabolismo. Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de
Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado y Jefa
del Servicio de Endo- crinología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente
Saturnino Lora de Santia- go de Cuba.
COLABORADORES

Dr. Ramón Abella Linares


Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefe
del Servicio de Oxigenación Hiperbárica del Hospital General Santiago,
Santiago de Cuba.
Dra. Soraida Cándida Acosta Brooks
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Osvaldo Aguilera Pacheco
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Neurología. Jefe del Ser-
vicio de Neurología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora
de Santiago de Cuba.
Dr. Carlos M. Angulo Elers
Especialista de Primer Grado en Cardiología. Responsable de Ecocardiogra-
fía del Servicio de Cardiología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Satur-
nino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Alfredo Aput Majfud
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Oncológico Conrado Benítez, Santiago de Cuba.
Dra. Sandra Ayala Serret
Especialista de Primer Grado en Genética del Hospital Infantil Sur Docente,
Santiago de Cuba.
Dra. Mabel Blanco Granda
Profesora Auxiliar de Anatomía Patológica del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Anatomía
Patológica. Jefa del Departamento de Anatomía Patológica del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Juan Blasco Casanova
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Especia-
lista de Segundo Grado en Reumatología. Jefe del Servicio de Reumatología
del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Max Santiago Bordelois Abdo
Profesor Auxiliar de Medicina Interna de la Facultad de Ciencias Médicas de
Guantánamo. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna,
verticalizado en Medicina Intensiva. Jefe del Servicio de Cuidados Intensivos
del Hospital Docente Agostinho Neto, Guantánamo.
Dr. José Orlando Bosch Castellanos
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Dr. Ambrosio Grillo de Santiago de
Cuba. Dra. Omaida Candebat Fernández
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Nefrología. Jefa del
Servicio de Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino
Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Juan Castellanos Tardo
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cardiología del
Cardiocentro del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de San-
tiago de Cuba.
Dra. Lilian Cordiés Jackson
Profesora Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de La Habana. Especialista de Segundo Grado en Medicina Interna
del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Hermanos Ameijeiras, Ciudad de La
Habana.
Dra. María Teresa Cordiés Jackson
Profesora Titular de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina
Inter- na del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago
de Cuba. Dr. Sixto B. Corona Mancebo
Profesor Titular de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de La
Habana. Especialista de Segundo Grado en Cirugía General del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Hermanos Ameijeiras, Ciudad de La Habana.
Dra. Eva Crespo Mengana
Asistente de Pediatría del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Especialista de Primer Grado en Pediatría. Jefa del Departamento
de Medicina General Integral de la Facultad de Medicina No.1 del Instituto
Su- perior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Dr. Juan de la Cruz Fernández
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cardiología. Jefe del Ser-
vicio de Hemodinámica del Cardiocentro del Hospital Clinicoquirúrgico Do-
cente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Mauro Cuba de la Cruz
Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Nefrología del Hospital Lucía Íñiguez, Holguín.
Dr. Héctor del Cueto Espinosa
Doctor en Ciencias Médicas. Profesor Titular–Consultante de Cirugía del
Ins- tituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista
de Se- gundo Grado en Cirugía General. Director del Cardiocentro del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Oscar Cutié Bresler
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector de Epidemiología Clínica del Hospital Clinicoquirúrgico
Docen- te Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Humberto Díaz García
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Ernesto Díaz Trujillo
Asistente de Medicina Interna de la Facultad de Ciencias Médicas de
Guantá- namo. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna,
verticalizado en Medicina Intensiva del Hospital Docente Agostinho Neto,
Guantánamo.
Dr. Carlos Felipe Domínguez Eljaiek
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefe
del Departamento de Especialización de la Dirección Provincial de Salud,
Santia- go de Cuba.
Dr. Rafael Domínguez Peña
Especialista de Primer Grado en Neurocirugía del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Guido Elías Leyva
Asistente de Cirugía de la Facultad de Ciencias Médicas de Guantánamo. Es-
pecialista de Primer Grado en Cirugía General del Hospital Docente
Agostinho Neto, Guantánamo.
Dra. Nilia Victoria Escobar Yéndez
Profesora Titular de Medicina Interna y Vicerrectora de Investigaciones del
Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de
Segundo Grado en Medicina Interna. Presidenta del Consejo Científico Pro-
vincial de la Salud, Santiago de Cuba.
Dr. Antonio Felizola Rodríguez
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cardiología. Jefe del
Servicio de Cuidados Intensivos del Cardiocentro del Hospital Clinicoquirúr-
gico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Reina Genellys Fernández Camps
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina
Interna. Farmacoepidemióloga del Hospital Clinicoquirúrgico Docente
Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Juan José Ferrer Ramos
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Justo Filiú Ferrera
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector Clínico del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora
de Santiago de Cuba.
Dra. Juana Adela Fong Estrada
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Espe-
cialista de Segundo Grado en Geriatría. Jefa del Servicio de Geriatría del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Dr. Ambrosio Grillo de Santiago de
Cuba. Dr. Francisco Gómez Álvarez
Especialista de Primer Grado en Neurología del Hospital Clinicoquirúgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Omar González de la Cruz
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina In-
terna del Hospital Militar Docente Joaquín Castillo Duany, Santiago de
Cuba. Dr. Pedro O. González Corona
Profesor Auxiliar de Laboratorio Clínico del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Laboratorio
Clínico del Hospital General Santiago, Santiago de Cuba.
Dr. Orestes González Martínez
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Inter-
na. Vicedirector Docente del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Dr.
Ambrosio Grillo de Santiago de Cuba.
Dra. Florángel Guasch Saint-Félix
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clínicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Xiomara Hechavarría Masabeau
Especialista de Primer Grado en Gastroenterología del Hospital Clinicoqui-
rúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Enrique Emilio Jiménez López
Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Mirtha Laguna Delisle
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Román Lannes Sansó
Especialista de Primer Grado en Anestesiología y Reanimación, verticalizado
en Medicina Intensiva, Nutríologo de la Unidad de Cuidados Intensivos e
Intermedios del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de San-
tiago de Cuba.
Dr. José Antonio Lamotte Castillo
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del Sanatorio del SIDA,
Santiago de Cuba.
Dra. Anelis Rosalía León Columbié
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Gastroenterología.
Jefa del Servicio de Gastroenterología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Sa- turnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Walter Lizardo León Goire
Profesor Auxiliar de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Jefe del Departamento Docente de Cirugía de la Facultad
de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de
Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cirugía General del Hospital Clini-
coquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Aniceto León Moreno
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cardiología. Responsable
de Ergometría y Rehabilitación del Servicio de Cardiología del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. José Ramón Malleuve Palancar
Especialista de Segundo Grado en Cardiología. Jefe de la Unidad de
Cuidados Intensivos Coronarios del Servicio de Cardiología del Hospital
Clinicoquirúr- gico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Eduardo Márquez Capote
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Intensivista de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Jorge Miranda Quintana
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirector Clínico del Hospital General Santiago de Santiago de Cuba.
Dr. Carlos Miyares Rodríguez
Profesor Auxiliar y Consultante de Medicina Interna del Instituto Superior de
Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Me-
dicina Interna de la Facultad de Medicina No. 2 del Instituto Superior de
Cien- cias Médicas de Santiago de Cuba.
Dr. Noel L. Moya González
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Medicina
Inter- na. Jefe del Servicio de Medicina Interna del Hospital
Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Daysi Antonia Navarro Despaigne
Doctora en Ciencias Médicas. Asistente de Medicina Interna del Instituto Su-
perior de Ciencias Médicas de La Habana. Especialista de Segundo Grado en
Endocrinología del Instituto Nacional de Endocrinología, Ciudad de La Ha-
bana.
Dr. Artemio Ortiz Sánchez
Asistente de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cirugía General del Cardiocentro
del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Cristina Julieta Pastó Pomar
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Máster en Atención Primaria de Salud. Especialista de
Pri- mer Grado en Medicina Interna del Departamento de Medicina General
Inte- gral de la Facultad de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba.
Dra. Cecilia Teresa Peña Sisto
Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturni-
no Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Doris Perdomo Leyva
Profesora Auxiliar de Farmacología del Instituto Superior de Ciencias Médi-
cas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Farmacología de
la Facultad de Medicina No. 1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba.
Dra. Olga Lidia Pereira Despaigne
Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Endocrinología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Sa-
turnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Arístides Pérez Pérez
Doctor en Ciencias Médicas. Profesor Titular de Medicina Interna del Institu-
to Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer
Grado en Medicina Interna del Hospital Militar Docente Joaquín Castillo
Duany, Santiago de Cuba.
Dr. Ernesto Piferrer Ruiz
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Intensivista de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Luis Roberto Piña Prieto
Instructor de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago
de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cirugía General del Hospital
Clini- coquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Marjoris Piñera Martínez
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Carolina Plasencia Azorey
Doctora en Ciencias Médicas. Instructora de Medicina General Integral del
Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de
Primer Grado en Medicina General Integral. Jefa del Departamento de Medi-
cina General Integral de la Facultad de Medicina No. 2 del Instituto Superior
de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Dra. Cecilia del Pozo Hessing
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizada en Medicina
Intensiva. Jefa de la Unidad de Cuidados Intermedios del Hospital Clinico-
quirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Ángel Prado Legrá
Profesor Auxiliar de Laboratorio Clínico del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Laboratorio
Clínico. Jefe del Servicio de Laboratorio Clínico del Hospital General
Santia- go, Santiago de Cuba.
Dr. Adolis Puig Rivas
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Alberto Manuel Puig Rosell
Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. María Caridad Pujadas Figueras
Instructora de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas
de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Neumología del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Modesto Quiala Romero
Especialista de Primer Grado en Medicina General Integral. Especialista de
Primer Grado en Endocrinología del Hospital General Santiago, Santiago de
Cuba.
Dr. Delmar Ramos Arias
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Neumología. Jefe del
Ser- vicio de Neumología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Dr.
Ambrosio Grillo de Santiago de Cuba.
Dr. Agustín Jorge Ravelo Viñuela
Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Orestes Rodríguez Arias
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Endocrinología. Jefe
del Departamento Docente de Ciencias Clínicas del Hospital Militar Docente
Joa- quín Castillo Duany, Santiago de Cuba.
Dra. Zoraida Rodríguez Bell
Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Aurelio Rodríguez Fernández
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Máster en Toxicología Clínica. Intensivista de la Unidad de Cuida-
dos Intermedios del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de
Santiago de Cuba.
Dr. Zenén Rodríguez Fernández
Profesor Auxiliar de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cirugía General del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Inés María Rodríguez Hechavarría
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna.
Vicedirectora de Asistencia Médica de la Dirección Provincial de Salud,
San- tiago de Cuba.
Dr. Inocente Rodríguez Reyes
Especialista de Primer Grado en Hematología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Luis P. Rodríguez Sánchez
Profesor Auxiliar de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Cirugía General. Jefe del
Servicio de Cirugía General del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturni-
no Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Nicolás Rojas Aldana
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Medicina
Intensiva. Intensivista de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Cli-
nicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Luis Felipe Rosillo Correa
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefe
del Servicio de Medicina Interna del Hospital Clinicoquirúrgico Docente
Dr. Ambrosio Grillo de Santiago de Cuba.
Dr. Arturo Sánchez Borges
Profesor Auxiliar de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Mé-
dicas de Santiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Cardiología.
Jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Clinicoquirúrgico Docente Sa-
turnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. María Teresa Santiago Sierra
Especialista de Primer Grado en Endocrinología del Hospital
Clinicoquirúrgi- co Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Justo Tamayo Velázquez
Especialista de Primer Grado en Nefrología del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. María Victoria de la Torre Rosés
Asistente de Medicina Interna de la Facultad de Ciencias Médicas de Guantána-
mo. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Jefa del Departamento
de Medicina General Integral de la Facultad de Ciencias Médicas de
Guantánamo. Dr. Sergio del Valle Díaz
Instructor de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna del
Hos- pital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dra. Monserrat Vázquez Sánchez
Asistente de Medicina General Integral del Instituto Superior de Ciencias
Médicas de Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina
General Integral. Máster en Atención Primaria de Salud. Vicedecana de
Aten- ción Primaria de la Facultad de Medicina No. 1 del Instituto Superior
de Cien- cias Médicas de Santiago de Cuba.
Dr. Miguel Ernesto Verdecia Rosés
Especialista de Primer Grado en Medicina Interna, verticalizado en Geriatría.
Jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Clinicoquirúrgico Docente
Saturni- no Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Luis Vergés Callard
Asistente de Medicina Interna del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
Santiago de Cuba. Especialista de Primer Grado en Medicina Interna,
verticalizado en Reumatología. Reumatólogo del Hospital Clinicoquirúrgico
Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. Juan Enrique Yara Sánchez
Profesor Titular de Cirugía del Instituto Superior de Ciencias Médicas de
San- tiago de Cuba. Especialista de Segundo Grado en Angiología del
Hospital Clinicoquirúrgico Docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba.
Dr. René Zambrano González
Especialista de Primer Grado en Endocrinología del Centro de Atención al
Diabético, Santiago de Cuba.
ÍNDICE

PRIMERA PARTE: ALTERACIONES DEL EQUILIBRIO HIDROMINERAL Y EL ACIDOBÁSICO


1. Equilibrio hidromineral/ 25
2. Alteraciones del agua y el sodio/ 38
Pérdida de agua (deshidratación)/ 38
Hipernatremia (hiperosmolaridad)/ 40
Hiponatremia (hiposmolaridad)/ 42
Pérdida real de sodio/ 42
Hiponatremia dilucional/ 44
Intoxicación acuosa/ 45
Síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética (SSIHAD)/ 46
Depleción mixta de agua y sodio (hipovolemia)/ 47
3. Alteraciones del potasio/ 48
Hipercaliemia/ 49
Hipocaliemia/ 51
4. Equilibrio acidobásico/ 53
5. Alteraciones del equilibrio acidobásico/ 64
Acidosis metabólica/ 67
Alcalosis metabólica/ 70
Acidosis respiratoria/ 73
Alcalosis respiratoria/ 75
Trastornos acidobásicos mixtos/ 76
6. Nutrición artificial/ 78
Nutrición parenteral/ 78
Nutrición enteral/ 84
Bibliografía/ 88

SEGUNDA PARTE: ENFERMEDADES DEL RIÑÓN


7. Recuento anatomofisiológico del riñón/ 91
8. Enfermedades glomerulares/ 97
Glomerulopatías de comienzo agudo/ 98
Glomerulonefritis aguda posestreptocócica/ 98
Glomerulonefritis aguda no estreptocócica/ 102
Glomerulonefritis rápidamente progresiva/ 103
Síndrome de Goodpasture/ 105
Glomerulopatías de comienzo insidioso/ 106
Síndrome nefrótico/ 106
Glomerulopatías primarias de comienzo insidioso/ 110
Glomerulopatía por depósitos de inmunoglobulina A (IgA)/ 113
Glomerulopatías secundarias de comienzo insidioso/ 115
9. Infecciones urinarias/ 121
Pielonefritis aguda/ 121
Pielonefritis crónica/ 126
10. Insuficiencia renal crónica/ 128
11. Insuficiencia renal aguda/ 134
12. Métodos de depuración extrarrenal/ 141
13. Diuréticos/ 145
Bibliografía/ 151

TERCERA PARTE: ENFERMEDADES DEL SISTEMA DIGESTIVO


14. Resumen anatomofisiológico del sistema digestivo/ 157
15. Cáncer del esófago/ 162
16. Gastritis/ 168
Gastritis aguda/ 168
Gastritis por Helicobacter pylori/ 168
Gastritis flemonosa/ 169
Gastritis crónica/ 169
Gastritis de tipo A/ 170
Gastritis de tipo B/ 170
Otros tipos de gastritis/ 171
Gastritis linfocítica/ 171
Gastritis eosinófila/ 171
Gastritis granulomatosa/ 171
17. Gastroenteritis aguda/ 172
18. Úlcera péptica gastroduodenal/ 177
19. Cáncer gástrico/ 184
20. Recuento de la fisiología del hígado/ 193
21. Hepatitis/ 197
Hepatitis viral aguda/ 197
Hepatitis crónica/ 207
Hepatitis autoinmune/ 212
22. Cirrosis hepática/ 216
Cirrosis alcohólica/ 226
Cirrosis biliar/ 228
Cirrosis biliar primaria/ 228
Cirrosis biliar secundaria/ 230
23. Cáncer del hígado/ 232
Cáncer primario del hígado/ 232
Cáncer secundario del hígado/ 235
24. Encefalopatía hepática/ 237
25. Colecistopatías/ 244
Disquinesias biliares/ 244
Sifopatías/ 247
Colecistosis/ 247
Colecistitis/ 250
Colecistitis crónica calculosa/ 250
Colecistitis crónica no calculosa/ 254
Colecistitis aguda no calculosa/ 254
26. Pancreatitis aguda/ 255
27. Pancreatitis crónica/ 261
28. Cáncer del páncreas exocrino/ 265
29. Síndrome de malabsorción intestinal/ 268
Esprue celíaco/ 275
Esprue tropical/ 277
Enfermedad de Whipple/ 278
30. Síndrome del intestino irritable/ 280
31. Enfermedad inflamatoria intestinal/ 283
Colitis ulcerosa/ 285
Enfermedad de Crohn/ 293
32. Cáncer de colon y recto/ 301
33. Sangramiento digestivo/ 310
34. Abdomen agudo/ 319
Síndrome peritoneal/ 322
Síndrome oclusivo/ 323
Síndrome hemorrágico/ 325
Síndrome mixto/ 326
Bibliografía/ 327

CUARTA PARTE: ENFERMEDADES DEL SISTEMA NERVIOSO


35. Recuento anatomofisiológico del sistema nervioso/ 335
36. Cefalea/ 343
37. Trastornos del movimiento/ 352
Enfermedad de Parkinson/ 353
Movimientos anormales involuntarios (discinesias)/ 359
Temblor/ 359
Balismo/ 359
Atetosis/ 360
Distonía/ 360
Mioclonias/ 360
Tics/ 360
Síndromes coreicos/ 360
38. Infecciones del sistema nervioso central/ 363
Meningitis/ 364
Meningitis bacterianas/ 364
Meningitis tuberculosa y afines/ 369
Meningitis aséptica o vírica y afines/ 371
Encefalitis/ 373
Panencefalitis esclerosante subaguda/ 375
Leucoencefalopatía multifocal progresiva/ 376
Enfermedad producida por priones/ 376
Kuru/ 376
Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob/ 377
Encefalitis letárgica/ 377
Absceso cerebral/ 378
39. Enfermedades cerebrovasculares/ 383
Trombosis cerebral/ 386
Infarto cerebral de tipo lacunar/ 391
Embolia cerebral/ 392
Ataque transitorio de isquemia cerebral/ 395
Hemorragia cerebral/ 400
Hemorragia cerebromeníngea/ 403
Hemorragia intraventricular primaria/ 404
Hemorragia subaracnoidea/ 404
Otras formas de enfermedad cerebrovascular/ 409
Enfermedad de Moya-Moya/ 409
Amnesia global transitoria/ 409
Demencia vascular o demencia multinfarto/ 409
Trombosis de los senos venosos/ 410
Malformaciones arteriovenosas/ 414
40. Tumores intracraneales/ 417
41. Tumores espinales/ 433
42. Traumatismos craneoencefálicos y raquimedulares/ 437
Traumatismos craneoencefálicos/ 437
Hematoma epidural/ 439
Hematoma subdural/ 439
Hematona intracerebral/ 440
Traumatismos raquimedulares/ 443
43. Mielopatía transversa aguda y subaguda/ 448
Mielitis/ 448
44. Tabes dorsal/ 450
45. Siringomielia/ 453
46. Enfermedades desmielinizantes/ 456
Esclerosis múltiple/ 457
Esclerosis cerebral difusa/ 463
Encefalomielitis aguda diseminada/ 463
Encefalitis posvacunal/ 464
Encefalitis posinfecciosa y posexantemática/ 464
Encefalomielitis hemorrágica necrotizante aguda (leucoencefalitis aguda hemorrágica de
Hurst)/ 465
47. Atrofias musculares/ 466
Distrofia muscular progresiva/ 467
48. Enfermedad degenerativa de la vía motora voluntaria/ 471
49. Polineuropatías/ 475
Síndrome de Guillain-Barré-Strohl/ 477
Polineuropatía inflamatoria desmielinizante crónica/ 480
Neuropatía motora multifocal/ 481
Neuropatía diabética/ 481
Neuropatía asociada al VIH/ 482
Neuropatía urémica/ 483
Neuropatía de Cuidados Intensivos/ 483
Polineuropatía carcinomatosa/ 483
Polineuropatía saturnina/ 483
Neuropatía epidémica cubana/ 484
50. Epilepsia/ 487
51. Estado de coma/ 501
52. Miastenia grave/ 511
Bibliografía/ 521
QUINTA PARTE: INTOXICACIONES Y ENFERMEDADES POR AGENTES FÍSICOS
53. Intoxicaciones exógenas/ 527
54. Intoxicación por pesticidas (plaguicidas)/ 537
Insecticidas/ 537
Intoxicación por organoclorados/ 537
Intoxicación por organofosforados/ 538
Intoxicación por carbamatos/ 540
Piretrinas/ 540
Herbicidas/ 540
55. Intoxicación por psicofármacos/ 543
Barbitúricos/ 543
Benzodiazepinas/ 546
Meprobamato/ 547
Antidepresivos/ 547
56. Intoxicación por paracetamol/ 550
57. Intoxicación aguda por drogas de abuso/ 552
Opiáceos y derivados/ 552
Cocaína/ 553
Anfetaminas y drogas de diseño de tipo anfetamínico/ 555
Alucinógenos y psicomiméticos/ 556
LSD-25/ 556
Fenciclidina/ 557
Cannabis (marihuana)/ 557
Abuso de inhalantes/ 558
Alcohol etílico o etanol/ 558
58. Intoxicación por venenos de animales/ 562
Picaduras por alacrán o escorpión/ 562
Picaduras de arañas/ 563
Picaduras por himenópteros (abejas y avispas)/ 563
Mordeduras de víboras o culebras/ 564
Ciguatera/ 565
59. Otras intoxicaciones/ 567
Hidrocarburos/ 567
Permanganato de potasio/ 568
Fósforo/ 568
Arsénico/ 570
Manganeso/ 571
Mercurio/ 572
Talio/ 572
Sustancias metahemoglobinizantes/ 573
Anilina y nitrobenceno/ 574
Plomo/ 576
Alcohol metílico/ 578
Etilenglicol y otros glicoles/ 580
60. Síndrome de ahogamiento incompleto/ 581
61. La enfermedad radiactiva/ 586
62. Choque o shock eléctrico/ 588
Bibliografía/ 594
Primera Parte

ALTERACIONES DEL EQUILIBRIO


HIDROMINERAL
Y EL ACIDOBÁSICO
1
EQUILIBRIO HIDROMINERAL
El agua del organismo en el plasma (4 % del peso corporal) y el líquido
intersticial (12 % del peso corporal).
El agua es imprescindible para la vida, y para que el
También la proporción de agua entre uno y otro
hombre pueda sobrevivir necesita no sólo procurár-
compartimiento varía según la edad; así, la extrace-
sela, sino también mantenerla dentro de límites muy lular es mayor en el recién nacido y el niño
estrechos, cualesquiera que sean las fluctuaciones pequeño que la intracelular, mientras que a partir
diarias entre sus ingresos y egresos. del año de edad las proporciones se invierten cada
El agua del cuerpo vez más (cua- dro 1.1).
La cantidad de agua que contiene el organismo hu-
CUADRO 1.1
mano fluctúa entre el 45 y 60 % del peso corporal DISTRIBUCIÓN DEL AGUA
en kilogramos, variación que depende de la edad, el EN DISTINTOS GRUPOS CRONOLÓGICOS (EN %)
sexo y del contenido de grasa, pues esta última es
prácticamente anhidra. Por esta razón, las mujeres Prematuro A término 1 año Adulto
tienen en relación con su peso menor cantidad de Agua corporal total 83 79 72-60 58
agua que los hombres (grasa corporal: 15 a 20 % del Agua extracelular (AEC) 50 44 32-27 19
peso corporal en hombres y 25 a 30 % en mujeres), Agua intracelular (AIC) 33 35 34-33 39
y los obesos poseen menor cantidad de agua que los AEC/AIC 1,50 1,25 1,14-0,83 0,48
delgados.
En el niño la proporción de agua corporal es ma- El agua total del cuerpo, como ya se explicó,
yor que en el adulto, aunque este aparente exceso es está repartida en dos grandes espacios: el
sólo relativo, ya que su contenido de agua es insufi- extracelular y el intracelular. Sin embargo, el
ciente para su superficie corporal, consumo de oxí- concepto de Edelman y Leibman, más dinámico,
geno, metabolismo general y otras necesidades. De parece también más ló- gico. Estos autores
ahí que sean tan vulnerables a los procesos de deshi- consideran que el líquido extra- celular tiene una
dratación. porción, el líquido intersticial, que es un
A medida que se gana en edad y se crece, la pro- ultrafiltrado del plasma rápidamente intercam-
porción de agua orgánica disminuye en relación con biable, y otra, contenida en el colágeno del tejido
el peso del cuerpo. Es probable que esto tenga que conectivo (tendones, cartílagos), que se intercambia
ver con el aumento de la grasa a medida que se en- con lentitud. Incluso plantean una tercera porción
vejece. representada por el agua ósea inaccesible, y lo que
ellos llaman agua transcelular, constituida por el lí-
Compartimientos líquidos del cuerpo quido de las cavidades serosas, el de la membrana
El agua total del cuerpo está repartida en dos gran- mucosa del árbol respiratorio, el líquido cefalorra-
des compartimientos o espacios: el compartimiento quídeo, los líquidos cavitarios del ojo y otros.
extracelular o agua extracelular (16 % del peso cor- Equilibrio hídrico
poral en adultos) y el compartimiento intracelular o El agua ingresa al organismo en dos formas: como
agua intracelular (35 % del peso corporal en adul- tal y formando parte de los alimentos, ya que del
tos). A su vez, el espacio extracelular está dividido 75 al 80 % de los alimentos sólidos que ingerimos
es agua. Además, una tercera fuente de ésta
depende

25
del sustrato que se oxida metabólicamente, ya que incrementan las pérdidas en 100 ml), mientras que
por cada 100 g de los elementos siguientes se for- una sudación manifiesta y continua durante 24 h
man: supone la pérdida de 500 ml. Si ésta es mucho más
Grasas 107 ml copiosa y moja claramente la ropa de cama o del
Carbohidratos 55 ml paciente, se puede calcular en 1 000 ml en las 24 h.
Proteínas 41 ml La pérdida diaria normal de agua por las heces
fecales es mínima, pues no sobrepasa los 150 a 200
Ésta es la llamada "agua endógena o de oxida- ml. En situaciones no fisiológicas, otras vías de
ción" (3 a 5 ml/kg/día). En situaciones no fisiológi- pér- dida de agua para el organismo o de pérdidas
cas, otras fuentes para el organismo las constituyen exage- radas por las vías habituales, las
los tratamientos con soluciones parenterales, las te- constituyen el vómito, la aspiración gástrica, la
rapéuticas dialíticas y otras. diarrea, los volú- menes segregados por fístulas,
El balance entre los ingresos y los egresos se lo- sondas y drenajes, así como las pérdidas hacia el
gra principalmente por la capacidad que tiene el ri- llamado "tercer espa- cio", aquel donde el agua
ñón de producir orinas muy concentradas cuando el resulta inaccesible para su utilización fisiológica,
agua escasea y muy diluidas cuando hay abundan- como en los derrames pleu- rales, ascitis, íleo
cia de este líquido. intestinal, etc. En las intervencio- nes quirúrgicas
del cráneo, tórax y abdomen las pérdidas
Entre los egresos líquidos hay que considerar en
insensibles se incrementan, pues se pier- den 5,
primer lugar la eliminación diaria de orina, que es
10 y 15 ml/kg/h de intervención quirúrgica
de unos 1 500 ml (1 ml/kg/h), de los cuales 500 son
respectivamente, mientras que en las de otro tipo se
obligatorios, puesto que la cantidad mínima de agua
pierde 1 ml/kg/h de trabajo quirúrgico.
con la cual el riñón puede excretar la carga diaria de
Al comparar los totales de ingresos y egresos, si
solutos (35 g) es de 15 ml por gramo de soluto, y el
el total de ingresos sobrepasa al de egresos, se dice
resto es facultativo o variable, ya que depende de la
que el balance hídrico es positivo. Si, por el contra-
disponibilidad de agua.
rio, los egresos son superiores a los ingresos, se
Una segunda vía que debe considerarse es la
con- sidera el balance negativo. Si la diferencia
perspiración insensible, en la que se pierden cada
entre los ingresos y egresos no es mayor de un 10
día en forma obligatoria alrededor de 900 ml en
%, se esti- ma el balance neutro. Si se suman
forma de vapor de agua (12 a 14 ml/kg) repartidos
diariamente estos resultados, se obtendrá un
así: 500 ml por la piel y 400 ml por los pulmones.
balance acumulado, de gran valor en la corrección
Conviene recordar que esta pérdida mínima obliga-
de estas alteraciones (cua- dro 1.2).
toria puede aumentar con la fiebre (cada °C de tem-
peratura por encima de 37°C que se mantenga elevado Los electrólitos
por 24 h, incrementa las pérdidas en 150 ml), la dis-
El agua del organismo no se encuentra como agua
nea (por cada 5 respiraciones por minuto que man-
pura, sino que en ella se hallan disueltas una serie
tengan elevada la frecuencia respiratoria, se
de sustancias, de las cuales unas son orgánicas,
como
CUADRO 1.2
EQUILIBRIO HÍDRICO
NORMAL DEL ORGANISMO

Ingresos Egresos

Obligatorios Facultativos Obligatorios Facultativos

Líquidos 600 1 000 Orina 500 1 000


Sólidos 650 Piel 500
Agua de Pulmón 400
oxidación 300 Heces 150
Subtotal 1 550 1 000 Subtotal 1 550 1 000
Total 2 550 Total 2 550

26
la glucosa, y otras inorgánicas, como el cloruro y el Difusión
bicarbonato de sodio. Es el paso de solutos desde regiones de mayor con-
Si en un recipiente que contiene una solución de centración a otras de menor concentración. Si en un
una sal orgánica como la glucosa (C6H12O6) se hace recipiente que contiene una solución concentrada
pasar una corriente eléctrica, no ocurre ningún cam- de una sal coloreada como el permanganato de
bio en la solución (Fig. 1.1). Pero si la solución a potasio, se añade agua cuidadosamente para que no
través de la cual se pasa la corriente eléctrica es de se mez- cle con la solución y luego se deja en
una sal inorgánica, como el cloruro de sodio (NaCl), reposo, las partículas de permanganato se mueven
al disolverse éste en agua no permanece en forma hacia el agua pura hasta lograr una concentración
de moléculas enteras como la glucosa, sino que cada similar en toda la solución. También las
molécula se disocia en sus iones correspondientes moléculas de agua de la parte de agua pura se
(Cl- y Na+), los cuales están dispersos en toda la so- mueven hacia la parte de la solución de
lución. Al pasar la corriente eléctrica, las partículas permanganato (Fig. 1.3).
o iones de cloro, que tienen carga negativa, migrarán
al polo positivo o ánodo, y por ello reciben el nom- Ósmosis y presión osmótica
bre de aniones; mientras que las de sodio, cargadas En un recipiente que contiene agua pura y está di-
vidido en dos partes por una membrana que es
positivamente, se dirigen al polo negativo o cátodo,
permeable al agua, las moléculas de agua de un
por lo cual se les llama cationes (Fig. 1.2). Este fe-
lado pasan constantemente al otro, de manera que en
nómeno de la migración eléctrica se conoce con el
equi- librio es igual el número de moléculas que se
nombre de electrólisis, y las sustancias que lo su-
mue- ven en ambos sentidos (Fig. 1.4).
fren (sales inorgánicas), electrólitos.
Si se añade más agua en un lado del recipiente,
En resumen, que en el agua del organismo huma- ésta se distribuye rápidamente en los dos lados has-
no están disueltas dos clases de sustancias: las ta alcanzar un equilibrio dinámico, en el cual es
electrolíticas, que se disocian en sus iones corres- igual el número de moléculas que se mueven en
pondientes, y las no electrolíticas, que no se diso- ambos sentidos, pero más que en el caso anterior,
cian. Nos interesan las primeras, pero antes de a causa de la mayor presión hidrostática (Fig. 1.5).
abordar su estudio deben recordarse algunos con- Es decir, que las moléculas de agua en una
ceptos útiles. "solución pura" están en constante movimiento y
tienden a escapar- se de ésta.
HC O
6 12 6
HC O
6 12 6
+ -
C6H12O6 C6H12O6

Fig. 1.1. Paso de la corriente eléctrica


C6H12O6 C6H12O6
en una solución de glucosa. Obsérvese
que no ocurre cambio en la solución.

Cl-
Cl-
Cl-

Cl- Na+
+ Na+ -
Na+ Cl- Fig. 1.2. Paso de la corriente eléctrica
Na+ en una solución de cloruro de sodio.
Cl- Na+ Obsérvese la migración de los iones de
cloro y sodio hacia el ánodo (polo
Na+ positivo) y el cátodo (polo negativo),
respectivamente.

27
H2 O

Solución Solución

1 2
Fig. 1.3. Representación de la difusión.
3 4

Fig. 1.4. Representación del movimiento de las moléculas de Fig. 1.5. Efecto de la adición de agua en un lado del recipiente
agua en un recipiente dividido en dos partes por una membrana representado en la figura anterior. Se mantiene el equilibrio,
permeable al agua. pero con un movimiento mayor de las moléculas.

Si se separan dos soluciones de diferente concen- independiente de las características químicas o


tración por una membrana que es permeable al agua eléc- tricas de dichas partículas, se llama presión
(solvente), pero no a los solutos, ésta pasa del lugar osmótica.
menos concentrado hacia el más concentrado tra-
tando de equilibrar las concentraciones. A este mo- Ultrafiltración
vimiento del solvente a través de una membrana Es el movimiento del solvente y de los solutos a
semipermeable como respuesta a una diferencia en tra- vés de una membrana semipermeable, por
la concentración de solutos, se le llama ósmosis, y efecto de un gradiente de presión hidrostática. La
se debe a que las partículas disueltas limitan el mo- filtración glomerular es un ejemplo.
vimiento de las moléculas de agua, por lo que dis-
minuye la tendencia de éstas a escaparse. A la fuerza Transporte activo
de atracción ejercida por el soluto sobre el agua, que Es el movimiento de un soluto desde regiones de
depende del número de partículas disueltas y que es menor concentración a otras de mayor concentra-
ción, o sea, el movimiento realizado contra un gra-

28
diente de concentración química o electroquímica. trólitos) con cargas positiva que con negativa para
Implica un gasto de energía y es el fenómeno opuesto que se mantenga la electroneutralidad del medio in-
al de la difusión. Un ejemplo de transporte activo lo terno, y, por lo tanto, la determinación de los elec-
constituye la reabsorción tubular de sodio. trólitos no puede hacerse en gramos o miligramos
Medidas de los electrólitos por ciento, ya que estas unidades de medida no nos
En medicina clínica se acostumbra utilizar el gramo informan de la interrelación de éstos, y por ello hay
y sus múltiplos, que son medidas de peso, para de- que utilizar otros sistemas de medida: el milimol y
terminar la cantidad de las sustancias disueltas en el el miliequivalente.
plasma (aunque en algunos países esto se mantiene,
Mol y milimol
otros, como el nuestro, han adoptado el sistema in-
Un mol de una sustancia es igual al peso atómico
ternacional de medidas). Así, cuando decimos que
de dicha sustancia expresado en gramos. Así, 1 mol
la cifra normal de glucosa en la sangre es de 80 mg %
de sodio es igual a 23 g de sodio, porque el peso
u 80 mg/dl, estamos expresando que la cantidad de
atómi- co de este elemento es 23, y 1 mol de cloro
glucosa contenida en 100 ml o en 1 dl de sangre
es igual a 35,5 g de cloro, porque el peso atómico
pesa 80 mg. Si se aplican este mismo sistema de
de éste es 35,5. Cuando se unen 1 mol de Cl con
medidas a la determinación de los electrólitos en el
1 de Na para formar NaCl, ocurre lo que se
plasma, los resultados son los siguientes:
representa en la figura 1.6. Cada partícula del mol
+
de Na (23 g), que como nos demuestra la "lente" es
) 60 mg % )Sodio326
(Namg % Bicarbonato (-HCO
3 un ion de Na, tie- ne una valencia o "enganche", y
Potasio (K+) 16 mg % Cloro (Cl-) 362 mg %
Calcio (Ca2+) 10 mg % Fosfato (HPO 42-) ´ 3,5 mg %
lo mismo sucede con el mol de Cl (35,5 g). En el
2+
Magnesio (Mg ) 1,5 mg % Sulfato (SO 4 ) 2- 1,5 mg % mol de Na existe el mismo número de partículas
--------------- Proteínas 7 000 mg % que en el de Cl, pero éste pesa más que aquél
353 mg % Ácidos orgánicos 15 mg % porque sus partículas son más pesadas (en la
-------------- figura se ha representado este mayor peso con
7 442 mg % partículas más grandes). Cuando unimos el mol
de Cl con el de Na, cada partícula o ion de cloro
La suma total de los electrólitos que tienen carga (Cl-) se une a una partícula o ion de sodio (Na+)
positiva (columna de la izquierda), no guarda rela- por medio de sus valencias o "engan- ches" y no
ción con la cantidad total de los de carga negativa queda ninguna partícula sin combinar. Se forma
(columna de la derecha). Cuando se trata de sustan- así 1 mol de NaCl que, como nos demues- tra la
cias no electrolíticas, esto no tiene importancia (ex- "lente", tiene el mismo número de partículas que
cepto en el caso de la glucosa, por su influencia en cada uno de los moles por separado, sólo que
la presión osmótica), pero en el de los electrólitos estas son ahora compuestas. El peso es de 58,5 g,
sí, pues como son elementos con carga eléctrica, hay pues se han sumado los pesos de ambos moles.
exactamente el mismo número de partículas (elec- En resumen, 1 mol de cualquier elemento, inde-
pendientemente de su peso, contiene siempre el
mismo
1 mol Na 1 mol Cl 1 mol NaCl

23 g 35,5 g 58,5 g

Fig. 1.6. Representación de la unión de 1 mol de Na con 1 mol de Cl. Se forma 1 mol de NaCl y no queda ninguna partícula libre.

29
número de partículas, y cuando determinamos una Por el contrario, si unimos 1 mol de Ca con 2 de Cl,
sustancia de la sangre en moles por litro, estamos sucede lo que se representa en la figura 1.9. Todas las
expresando la cantidad de partículas o iones que hay partículas de Ca se combinan porque hay doble
de esa sustancia en un litro de sangre. En el organis- can- tidad de partículas de Cl, y se forma 1 mol de
mo humano los elementos por determinar se encuen- CaCl2
tran en cantidades pequeñísimas, por lo que se (contiene igual número de partículas que 1 mol de
emplea el milimol (mmol), que es la milésima parte Cl o de Ca, sólo que ahora éstas son triples).
de 1 mol. De todo lo expuesto anteriormente, se concluye
Si en vez de unir 1 mol de Cl con 1 de Na para que 1 mol de Na combina con 1 de Cl, o sea, 1 mol
formar 1 mol de NaCl, combinamos pesos iguales de de Na equivale (o tiene un peso equivalente) a 1 de
ambas sustancias, sucede lo que se representa en la Cl, y que 1 de Ca necesita 2 moles de Cl para com-
figura 1.7. Cada partícula del mol de Cl se ha encon- binarse, o sea, 1 mol de Ca equivale (o tiene un
trado con su homóloga en los 35,5 g de Na, pero aho- peso equivalente) a 2 de Cl. Por lo tanto, se
ra habrá un excedente de partículas de Na que no
deduce con facilidad que 1 mol de Ca contiene 2
tendrán Cl para combinar y, por lo tanto, sobrarán. Se
equivalentes (eq) de Ca y que a diferencia del mol,
formarán entonces 58,5 g de NaCl, como en el caso
que expresa núme- ro de partículas o iones, el
anterior, y un exceso de 12,5 g de Na, y no 71 g de
equivalente es una uni- dad de medida que
NaCl como hubiera podido esperarse, lo cual se debe
a que los electrólitos no combinan entre sí de acuerdo expresa el número de cargas, valencias o
con su peso, sino según el número de partículas con- "enganches". Por ello, 1 mol de un ion
tenidas en las cantidades que reaccionan. monovalente, como el Cl- o el Na+, es igual a un
equivalente, o lo que es lo mismo, contiene un
equi- valente, pues como cada ion o partícula
tiene una
1 mol NaCl

Na 1 mol Cl + Na

35,5 g 35,5 g 58,5 g

Fig. 1.7. Representación de la unión de pesos iguales de Na y Cl. Se forma 1 mol de NaCl, pero sobran partículas de Na porque
no encuentran Cl para combinar.

Equivalente y miliequivalente sola valencia, habrá el mismo número de iones que


Si se combina 1 mol de Cl con 1 de Ca, ocurre lo que de valencias. En cambio, 1 mol de un ion bivalente,
se representa en la figura 1.8. La partículas del mol como el Ca2+ y el Mg2+, es igual o contiene 2 equi-
de Ca igualan en número a las del mol de Cl, pero valentes, pues como cada ion tiene 2 valencias, ha-
en lugar de 1 valencia o "enganche" poseen 2, por lo brá doble número de valencias que de iones.
cual tienen doble poder de combinación; es decir, Naturalmente, 1 mol de un ion trivalente o tetrava-
que cada partícula de Ca necesita combinarse con 2 lente contendrá 3 o 4 equivalentes.
de Cl. Es por ello que queda sin combinarse la mi- Por todo lo explicado, se llega a la conclusión de
tad de las partículas del mol de Ca. la definición del equivalente como el peso atómico

30
1 mol Ca 1 mol Cl

40 g 35,5 g
Fig. 1.8. Representación de la unión de 1 mol de Ca con 1 mol de Cl. La mitad de las partículas de Ca queda sin combinar.

1 mol Ca 2 mol Cl 1 mol CaCl2

40 g 71 g 111 g

Fig. 1.9. Representación de la unión de 1 mol de Ca con 2 moles de Cl. Todas las partículas se combinan.

(p.a.) de una sustancia expresado en gramos y divi- resultado lo que se conoce como ionograma
dido por la valencia (v), por ejemplo: normal del plasma:

1 eq de Ca2+ = p.a. . Ca 4 = 0 0 g Na+ 142 meq/L H CO 3- 27 meq/L


K+ 4 meq/L Cl- 101 meq/L
2= Ca2+ 5 meq/L H PO 2- 2 meq/L
v 2
1 eq de Na+ = p.a. . Na =23 =23 g 4
Mg2+ 2 meq/L SO 42- 1 meq/L
v 1
---------- Proteínas 16 meq/L
153 m eq/L Ácidos orgánicos 6 meq/L
Por la misma razón ya explicada antes, en medi- -----------
cina clínica se emplea la milésima parte del equiva- 153 m eq/L
lente, o sea, el miliequivalente (meq), que es lo
mismo que 1 milimol por litro (mmol/L) en las sus-
tancias monovalentes. La determinación de los electrólitos en el plasma
Si ahora volvemos a determinar los electrólitos en meq/L o mmol/L, arroja una cifra de cationes o
en el plasma, pero utilizando el miliequivalente o el iones con carga positiva exactamente igual a la de
mmol/L como unidad de medida, se obtendrá como aniones o iones con carga negativa, diferente a lo

31
que ocurría cuando se hacía la medición en mili- En cuanto a la composición electrolítica del lí-
gramos por ciento. quido intracelular, hay disparidad de criterios, pues
En resumen, los electrólitos combinan entre sí, algunos autores sostienen que dadas las funciones
no ya de acuerdo con el número de partículas, como tan disímiles de las células de los distintos órganos
se dijo antes, sino con el número de valencias con- especializados, es muy probable que también sea
tenidas en las cantidades que reaccionan. En los re- variable el contenido electrolítico de dichas células;
otros creen, por el contrario, que la distribución
sultados del ionograma normal del plasma existe la
electrolítica celular es uniforme. Generalmente en
misma cifra de valencias positivas que negativas. las células abunda el potasio entre los cationes, y
Método para convertir las medidas los fosfatos y proteinatos, entre los aniones.
Para convertir en miliequivalentes por litro una can- Presión osmótica de los líquidos del cuerpo
tidad dada de un elemento en miligramos por cien- Como ya se explicó, la presión osmótica es la fuer-
to, se aplica la fórmula: za de atracción que ejercen sobre el agua los
solutos
mg% . v . 10 disueltos en ella, y depende del número de partícu-
meq/L = p.a. las en la solución. Se mide en miliosmoles por litro
Si se quiere convertir en miligramos por ciento (mosm/L), medida que se define como la presión
una cifra dada en miliequivalentes por litro, se apli- osmótica que ejerce un milimol.
ca la fórmula: Un milimol de glucosa ejerce una presión osmó-
tica de 1 miliosmol porque su molécula no se diso-
meq/L . p.a. cia, pero 1 milimol de NaCl tiene una presión
mg% =
v . 10 osmótica de 2 miliosmoles, porque al disolverse su
El HCO
- molécula se separa en 2 partículas, una de Cl- y otra
3
—la llamada reserva alcalina— se pue- de Na+. A su vez, 1 milimol de Cl Ca ejercer una
2
de dosificar en miliequivalentes o milimoles por li-
tro, que es lo habitual, o también en volúmenes por presión osmótica de 3 miliosmoles porque su mo-
ciento de CO2 (v%), o sea, mililitros del gas conte- lécula se separa en 3 partículas, 1 de Ca2+ y 2 de Cl-.
nidos en 100 ml de plasma. Un milimol de Na tiene una presión osmótica de 1
Para convertir miliequivalentes o milimoles por miliosmol, y 1 milimol de Ca ejercer también una
litro de HCO en vol% de CO , se aplica la fórmula:
- presión osmótica de 1 miliosmol, ya que dicha pre-
3 2 sión sólo depende del número de partículas y no de
la carga eléctrica u otra propiedad química de éstas.
v % = meq/L . 2,2 La suma de los cationes y aniones del plasma arroja
Distribución de los electrólitos una cifra total de 306 meq/L. Si todos los
en los compartimientos líquidos elementos de esta suma fueran univalentes,
pudiéramos decir que equivale a 306 mmol/L y que
En el ionograma del plasma predominan el sodio la presión osmótica normal del plasma sería 306
como catión y el cloro como anión. En la práctica mosm/L. Pero resulta que de forma aproximada el
diaria, habitualmente no se determinan todos los ele- 7 % de la suma de estos iones depende de
mentos del ionograma, sino sólo los iones Na, K, Cl elementos bivalentes, como el Ca2+ y el Mg2+, y
y -HCO . sabemos que en el caso de los cuerpos bivalentes, 1
3
Como el líquido intersticial es un ultrafiltrado del milimol contiene 2 miliequivalentes y, a su vez, 1
plasma, su composición electrolítica es muy seme- miliequivalente posee medio milimol. Es evidente,
jante a la de éste. Sin embargo, contiene más cloro y por lo tanto, que la presión osmótica del plasma
mucho menor cantidad de proteínas que el plasma, no será igual a la suma de los cationes y
porque el endotelio vascular es prácticamente im- aniones, sino algo menor. Normalmente se la consi-
permeable a las proteínas, y toda vez que estas se dera entre 285 y 290 mosm/L.
comportan como aniones cuando el pH de la sangre Cuando una solución tiene una concentración
es normal, tiene que pasar en exceso otro anión al osmolar semejante a la del plasma, se dice que es
intersticio para que se mantenga la electroneu- isotónica o isosmótica porque, en clínica, tonicidad
tralidad. es sinónimo de osmolaridad. Toda solución con

32
mayor concentración será hipertónica e hiperosmó- uniformidad que normalmente tiene la presión
tica, e hipotónica e hiposmótica si su concentración osmótica en los diferentes espacios.
es menor que la del plasma. El movimiento del agua entre el plasma y el lí-
El sodio, cuya cifra normal es 142 meq/L (o mmol/L), quido intersticial se debe a las diferencias
contribuye exactamente con la mitad de solutos a la existentes entre la presión hidrostática (PH) y la
fuerza total de la presión osmótica. Por lo tanto, des- presión oncó- tica (PO). En el extremo arterial del
de ese punto de vista es el electrólito más importan- capilar, la desi- gualdad está a favor de la primera,
te en los espacios extracelulares, al igual que el y en el extremo venoso, a favor de la segunda (Fig.
potasio en el espacio intracelular. Pero el sodio pasa 1.10).
de manera libre del plasma al intersticio, al contra- En el extremo arterial del capilar predomina la
rio de las proteínas, que por tratarse de grandes mo- PH sobre la PO, por lo cual el agua se escapa del
léculas están confinadas al interior de los vasos. Por plasma al intersticio; en la parte media del capilar,
esta razón, el sodio, si bien es el elemento más im- la pérdida de agua y la resistencia del vaso al flujo
portante en el mantenimiento de la presión osmótica
de la sangre equilibran las presiones, y en el extre-
de todo el espacio extracelular, no lo es en cuanto se
mo venoso del capilar predomina la PO, lo que se
refiere a la presión osmótica efectiva del plasma,
función esta que corresponde a las proteínas plas- debe probablemente al aumento de dicha presión
máticas. Por ello se le llama presión coloidosmótica por la pérdida de líquido. Esto, por supuesto, hace
o presión oncótica. que el líquido intersticial regrese al plasma.
En el cuadro 1.3 se establece la relación mol-equi- Movimiento de los electrólitos
valente-osmol de algunos elementos y sustancias. Al igual que el endotelio vascular es permeable al
agua, lo es prácticamente a todos los electrólitos,
CUADRO 1.3
RELACIÓN DE LAS DISTINTAS UNIDADES DE MEDIDA EN ALGUNOS ELEMENTOS DEL PLASMA

Elementos Peso Mol Equivalente Osmol


y sustancias atómico (p.a.) (eq)

Na 23 1 1 1
NaCl 58,5 1 2 (Na+, Cl-) 2 (Na, Cl)
Ca 40 1 2 (Ca2+) 1
4 (Ca +, 2 Cl ) 3 (Ca, Cl, Cl)
2+ -
Ca Cl2 111 1
Na2SO4 142 1 4 (2Na , SO 2-) 3 (Na, Na, SO )
4 4
C6H12O6 180 1 * 1

* La glucosa es una sustancia no electrolítica.

Movimiento del agua por lo cual éstos pasan de forma libre del plasma al
y de los electrólitos intersticio por simple filtración. Pero no sucede así
con la membrana celular, que es impermeable a los
Movimiento del agua electrólitos, y sólo mediante un transporte activo
Tanto el endotelio vascular como la membrana ce- pueden éstos atravesarla. La naturaleza exacta de
lular son permeables al agua, por lo cual ésta pasa este transporte no se conoce bien. El interior de la
libremente, siguiendo gradientes osmóticos, de un célula es negativo en relación con el exterior, y esta
espacio a otro. La pérdida o ganancia de solutos en nega- tividad parece deberse a la presencia de
cualquiera de ellos —ocurre casi siempre de forma grandes com- plejos de proteínas y fosfatos en la
inicial en el plasma, que es el espacio en contacto célula, que son aniones. El potasio, cuyos cationes
con el exterior—, con los consiguientes cambios en hidratados son más pequeños que los de sodio, es
la presión osmótica, provoca inmediatos movimien- absorbido con preferencia por los complejos
tos del agua desde los sitios menos concentrados a aniónicos intracelula- res, a la vez que el sodio es
los de mayor concentración, con el fin de restituir la removido de manera activa de la célula,
probablemente por el mecanis- mo de la llamada
"bomba de sodio", contra un

33
Tejidos

CAPILAR
PH
35 mmHg PO
Extremo PH PO Extremo
25 25 25
arterial venoso
PO PH
25 mmHg 15

+10 -10

Fig. 1. 10. Efectos de las presiones hidrostática y oncótica sobre el movimiento del agua entre el plasma y el espacio intersticial
a nivel del capilar.

gradiente de concentración. Esto hace que el exte- Cuando hay un exceso de agua y, por lo tanto,
rior de la membrana sea positivo. una presión osmótica disminuida en la sangre que
En el interior de la célula apenas hay cloro. Se alimenta a los centros, el mecanismo funciona en
piensa que como se trata de un ion con carga negati- forma totalmente inversa.
va, quizás la negatividad intracelular le impida la Se ha pensado que la deshidratación intracelular
entrada. que acompaña a la pérdida de agua, pudiera actuar
como estímulo periférico de la sed, pero es muy
Regulación del agua del cuerpo pro- bable que esta deshidratación celular, que
El organismo tiene necesidad de mantener no sólo también debe ocurrir en las células de los centros
un volumen determinado de agua, sino también una de la sed, sea el verdadero estímulo. Es decir, que
también en este caso el estímulo sería central y
concentración adecuada de solutos en ella, de ma-
no periférico como parece.
nera que la presión osmótica permanezca dentro de
límites estrechos. Esto se consigue mediante el me- Los riñones y la hormona antidiurética
canismo de la sed, la secreción de hormona antidiu- El filtrado glomerular es alrededor de 100 ml/min;
rética y de aldosterona, y la intervención de los luego, en cada minuto la cápsula de Bowman reci-
riñones, que son los responsables de retener o be 100 ml de un líquido que es un ultrafiltrado del
eliminar agua según las necesidades. Aunque estos plasma, virtualmente carente de proteínas, e
mecanismos funcionan en íntima relación, serán isosmótico o isotónico. El recorrido y los cambios
descritos por separado con el objetivo de facilitar su que sufren en el aparato tubular estos 100 ml de
comprensión. Mecanismo de la sed orina inicial, se explican mediante el llamado
mecanismo de la contracorriente.
Los centros de la sed radican en la zona ventromedial En el túbulo contorneado proximal se reabsorbe
del hipotálamo. Los cambios mínimos en la presión en forma activa el 85 % del sodio filtrado, y
osmótica de la sangre que los baña, los estimulan o siguien- do el gradiente osmótico que esto crea
inhiben, según sea el caso. entre el líqui- do tubular y la corteza renal, la
Cuando falta agua, la presión osmótica aumenta- misma cantidad de agua en forma pasiva. Llegan,
da en la sangre que llega a los centros de la sed los por lo tanto, 15 ml de líquido isosmótico a la
estimula, y de ellos parten impulsos hacia la corteza entrada del asa de Henle. Estos 15 ml
cerebral, donde se hace consciente la sensación de isosmóticos, durante su recorrido por la rama
sed. Sobreviene entonces el deseo de tomar agua. descendente del asa de Henle, que es relativa-
mente impermeable al NaCl, pero permeable al
agua,

34
se ponen en contacto a través del epitelio tubular tradas, con ahorro de agua y reducción de la
con una médula renal, que es cada vez más hipertó- presión osmótica del plasma.
nica. Por ósmosis, el agua se mueve desde el túbulo Cuando hay un exceso de agua (Fig. 1.12), por
al intersticio, y como consecuencia de esto, cuando un mecanismo totalmente inverso al anterior se
los 15 ml que habían entrado isotónicos al asa de inhibe la secreción de ADH. Las paredes del
Henle llegan a la curva de dicha asa, han disminui- túbulo con- torneado distal y los tubos colectores
do de volumen y se han vuelto marcadamente hi- permanecen impermeables al agua, por lo cual el
pertónicos. líquido hipotó- nico que proviene de la rama
La rama ascendente del asa de Henle, a diferen- ascendente del asa de Henle persiste como tal, y
cia de la descendente, es impermeable al agua. Por aun se hace más hipotó- nico por la reabsorción de
un mecanismo de transporte activo de cloro y resor- sodio que siempre ocurre en este tramo de la
ción pasiva de sodio, ambos iones son reabsorbidos nefrona. El resultado final es la eliminación de
de dicha rama y pasan al intersticio; es así que la agua y la emisión de orinas abun- dantes y
médula renal adquiere su creciente hipertonicidad. diluidas, con aumento de la presión osmótica del
Además, también por este motivo el líquido que lle- plasma.
ga al final de la rama ascendente del asa es siempre
hipotónico, independientemente de las necesidades 300 300 125
líquidas del organismo. A partir de este momento 300 150 100
ocurren dos situaciones distintas, según haya o no 500 500 500 300 500 80
necesidad de ahorrar agua.
700 700 700 600 700
Cuando el organismo está carente de agua (Fig. 60
1.11),
el aumento de la presión osmótica desencadena el 900 900 900 800 900
mecanismo de la sed y estimula unos osmorrecepto- 1 000
res situados en el hipotálamo (próximos a los cen- 1 000 1 000 1 000 1 000
1 200
tros de la sed), los cuales producen liberación de la 1 200 1 200 50
hormona antidiurética (ADH). La ADH permeabiliza
el epitelio del túbulo contorneado distal y los tubos Difusión pasiva de H2O
colectores al agua, los cuales normalmente no lo son, Transporte activo de Cl- o Na+
de manera que el líquido tubular hipotónico, puesto Fig. 1.12. Mecanismo de la contracorriente cuando hay exceso
en contacto primero con una corteza renal isotónica de agua, el cual permite la eliminación de orinas diluidas.
y luego con una médula que es cada vez más hiper-
tónica, por ósmosis disminuye de forma progresiva Los riñones y la aldosterona
de volumen y se torna muy hipertónico. El producto Cuando hay una reducción del volumen sanguíneo
final es la eliminación de orinas escasas y concen- circulante, disminuye también el flujo plasmático
Corteza
re- nal. En respuesta a esto, el aparato
yuxtaglomerular libera renina, la cual actúa sobre
una alfa-2-globulina
300 250 o sustrato de renina, y la transforma en angiotensina
300 150 300
Médula 300 I. Sobre esta sustancia, que es un decapéptido
inactivo,
500 500 500 300 500 500 actúa la enzima pulmonar convertidora de angioten-
700 700 700 600 700 700 sina y la transforma entonces en un octapéptido,
que es la angiotensina II, la cual tiene gran
acción
900 900 900 800 900 900
vasopresora, pero que además provoca liberación de
1 000
1 000 1 000 1 000 1 000 1000 aldosterona por la corteza suprarrenal.
1 200 1 200 1 200 1200 La aldosterona produce reabsorción de sodio en
el túbulo proximal y distal mediante un
intercambio
Difusión pasiva de H 2O
con iones de hidrógeno y potasio. Como se trata de
Transporte activo de Cl- o Na +
una reabsorción de sodio junto con agua, en forma
Fig. 1.11. Mecanismo de la contracorriente cuando hay carencia isotónica, habrá un aumento del volumen plasmáti-
de agua, el cual permite la eliminación de orinas concentradas.
co circulante, y de todos los líquidos del cuerpo.

35
En caso de incremento del volumen sanguíneo esta relación se le ha denominado balance
circulante, como ocurre en la sobrehidratación, se glomeru- lotubular. Es así que a mayor cantidad de
desencadena el mecanismo contrario. La pérdida de sodio fil- trado mayor cantidad de sodio
sodio, al no reabsorberse este ion en el túbulo distal reabsorbido, y a menor cantidad de sodio
por falta de aldosterona, arrastra agua, con la consi- filtrado, menor cantidad de sodio reabsorbido.
guiente diuresis. Disminuye así el volumen plasmá- Esta relación directa es váli- da, por supuesto, para
tico circulante, al igual que el agua de todo el cuerpo. cantidades absolutas de este catión.
Regulación renal del sodio Acción de la aldosterona: La aldosterona es un
mineralocorticoide segregado por la capa glomeru-
El catión sodio es el responsable fundamental de la
losa de la glándula suprarrenal, que interviene en la
osmolaridad del espacio extracelular, por lo cual sus
reabsorción del 12 al 14 % del sodio filtrado. Ya se
concentraciones deben mantenerse dentro de lími-
explicó anteriormente como realiza su función esta
tes estrechos. La concentración de sodio en el espa- hormona.
cio extracelular depende, en condiciones fisiológicas, Factores no aldosterónicos: Los cambios
del sodio ingerido en la dieta y de la excreción de rápidos que se suceden en la excreción de sodio
dicho elemento por el riñón. no son atribuibles a las variaciones de la filtración
La regulación renal del sodio es un hecho com- glomeru- lar ni de la aldosterona. De Wardener los
plejo. Solo el 1 % del sodio filtrado por los glomé- atribuyó a lo que llamó factores no aldosterónicos.
rulos se encuentra en la orina de los individuos Entre ellos se encuentran:
privados totalmente de este catión, e incluso en es-
tos casos la reabsorción puede ser hasta de un 100 %. 1. Péptido auricular natriurético: Éste es un
El 85 % de la reabsorción de sodio ocurre a nivel del péptido segregado por la aurícula, constituido
túbulo contorneado proximal y del segmento por 28 aminoácidos en su forma activa, que
delgado del asa de Henle, mientras que el resto es incrementa el flujo sanguíneo renal y el filtra-
reabsorbido en el túbulo contorneado distal. do glomerular, disminuye la reabsorción de
El sodio que aparece en la orina (Nae) es el que sodio por los tubos colectores medulares, e
corresponde a la diferencia entre el sodio filtrado inhibe la producción de renina y aldosterona.
(Naf) y el sodio reabsorbido (Nar), o sea: 2. Prostaglandinas: Se sintetizan en diferentes
cé- lulas renales y desempeñan un importante
Nae = Naf - Nar pa- pel en la regulación de la excreción del
sodio y el agua, pues modulan los efectos de
Por lo tanto, el sodio que se elimina está en estre- otras hor- monas. Por ejemplo, la angiotensina
cha relación con las necesidades del organismo. Esto II estimu- la la síntesis de las prostaglandinas
es regulado por el riñón, gracias a las funciones de E2 e I, que incrementan los efectos vasculares
filtración glomerular y de reabsorción tubular. y sobre el sodio de la propia angiotensina II.
Reabsorción tubular del sodio La inhibi- ción de las prostaglandinas
disminuye el filtra- do glomerular.
La reabsorción tubular del sodio depende fundamen-
talmente de tres factores: la disponibilidad de sodio 3. Arginina vasopresina: Incrementa el filtrado
(cantidad de sodio que llega a la cápsula de glomerular, lo que refuerza la reabsorción del
Bowman), la acción de la aldosterona y la de facto- sodio en el túbulo contorneado proximal.
res no aldosterónicos. 4. Hormona natriurética: Está constituida por un
Disponibilidad de sodio: La cantidad de sodio fil- grupo heterogéneo de compuestos (factores si-
trado es uno de los factores que regulan la reabsor- milares a la digital), que bloquean la Na-K-
ción tubular de este catión, aunque la capacidad de ATPasa en estados de expansión de volumen.
reabsorción de los túbulos es en definitiva lo más Su papel en la homeostasis del sodio no está
importante. Existe una relación directa entre la can- totalmente definido.
tidad de sodio reabsorbido y la de sodio filtrado. A 5. Dopamina: La excreción renal de dopamina
disminuye la reabsorción del sodio en el
túbulo
36
contorneado proximal al inhibir la Na-K- agua, el flujo sanguíneo renal y el filtrado glo-
ATPasa. merular.
6. Sistema nervioso simpático: La actividad ner- 7. Factores físicos: El incremento de la presión
viosa simpática renal eferente provoca natriu- osmótica pericapilar y la disminución de la
resis, mientras que la depleción salina se asocia pre- sión hidrostática peritubular, favorecen el
a una mayor actividad simpática. La denerva- mo- vimiento del sodio y el agua de los
ción renal bloquea la conservación del sodio. espacios laterales intercelulares hacia los
La estimulación simpática directa altera la se- capilares. Lo contrario favorece el paso del
creción de renina, la reabsorción de sodio y agua hacia la luz tubular.
37
2

ALTERACIONES DEL AGUA Y EL SODIO


La cantidad total de sodio en el organismo es de 3. Contribuye al mantenimiento del equilibrio
unos 4 200 a 5 600 mmol (aproximadamente de 60 aci- dobásico.
a 80 mmol/kg de peso corporal). El 45 % de este 4. Interviene, conjuntamente con otros electróli-
sodio es extracelular y sólo el 7 % se encuentra den- tos, en la regulación de la excitabilidad neuro-
tro de las células. El 48 % restante está contenido muscular, mientras que el calcio, el magnesio
en los huesos y la mitad de éste es intercambiable y los hidrogeniones la disminuyen.
con el del espacio extracelular. 5. Tiene importante participación en la fisiología
Por lo general se ingieren de 12 a 15 g de sodio del riñón.
diariamente en forma de cloruro (el cloro sigue en
el organismo, hasta cierto punto una trayectoria muy
Trastornos del agua y del sodio
similar a la del sodio), aunque para cubrir los re- El agua y el sodio se encuentran relacionados de
querimientos bastarían sólo unos 5 g. for- ma tan íntima, que por regla general las
Las pérdidas de sodio, que por supuesto igualan alteraciones de uno repercuten sobre el otro. Por
a los ingresos, se producen principalmente por el ello es práctica- mente imposible que se pierda
riñón (90 %); el resto, por las heces fecales y la piel; agua sin sodio o vi- ceversa, aunque muchas veces
por esta última en forma de sudor. puede haber un franco predominio de la pérdida de
un elemento sobre el otro. Otra cuestión
El sodio es tan importante para el organismo, so-
importante radica en que son los dos elementos
bre todo en el mantenimiento de la presión osmótica
básicos en el mantenimiento del vo- lumen y de la
extracelular, que a los 3 o 5 días de su supresión de
osmolaridad extracelular, y dada la íntima relación
la dieta desaparece totalmente de la orina, es decir,
entre ambos, sus alteraciones oca- sionan
que su reabsorción y ahorro son completos en esta variaciones en este volumen y esta osmolari- dad,
situación. que adoptan en la práctica la forma de una
hiposmolaridad o una hiperosmolaridad, o una hi-
Funciones del sodio povolemia, y se manifiestan a través de una hipona-
1. El sodio es el principal catión extracelular y el tremia, una hipernatremia o una depleción mixta de
electrólito básico en el mantenimiento de la agua y sodio, respectivamente. Por otra parte, algu-
presión osmótica. Tan pronto tiene lugar un dé- nas veces lo que existe en realidad es un exceso de
ficit de ingestión o una pérdida extrarrenal de agua.
sodio, de inmediato deja de eliminarse por la
orina, lo cual refleja la necesidad que tiene el
organismo de ahorrarlo.
2. Forma parte de los jugos digestivos, especial-
PÉRDIDA DE AGUA
mente de las secreciones que se producen por (DESHIDRATACIÓN)
debajo del píloro. Por tanto, se pierde en las
diarreas, junto con el potasio y el bicarbonato,
y en menor proporción en los vómitos, donde
Etiología
la pérdida fundamental es de cloro e hidroge- Se pierde agua en los casos siguientes:
niones. 1. Pacientes debilitados u obnubilados, a los cua-
les no se les aporta el líquido suficiente.

38
2. Diabetes insípida neurogénica o nefrogénica. Paso del agua del Deshidratación celular
EIC al EEC
3. La utilización de diuréticos osmóticos. Al em- Sed
plearlos se pierde más agua que sales, lo que Pérdida de agua Disminución Aumento secreción
del VPC de aldosterona
provoca la hiperosmolaridad. Aumento osmolaridad
4. Por vía digestiva, por diarreas o fístulas con EEC Mayor reabsorción
eliminación excesiva de agua. Aumento secreción ADH
de sodio
5. En pacientes con obstrucción intestinal o íleo,
Mayor reabsorción de agua
pancreatitis o peritonitis, en los cuales se acu-
mulan grandes cantidades de líquido en el pe- Oliguria
ritoneo o el intestino, no útiles al espacio
extracelular (efecto “tercer espacio”). Fig. 2.1. Fisiopatología de la pérdida de agua.
6. Cuando después de sudaciones profusas, en
que se pierde más agua que sales (el sudor es Deshidratación moderada: Corresponde a un dé-
un líquido hipotónico. Na = 60 mmol/L), am- ficit de agua de hasta un 6 % del peso corporal. A
bos se administran en cantidades proporcio- la sed se añaden la sequedad de la piel y las
nales. mucosas y escasa secreción lagrimal y salival, por
7. En el posoperatorio y en el quemado, cuando lo cual el enfermo habla con dificultad (boca
no se reponen las pérdidas insensibles de lí- pegajosa). Hay signo del pliegue cutáneo y
quido. marcada debilidad y pérdida de peso. Puede haber
8. Cuando a los pacientes en nutrición enteral taquicardia por dismi- nución del volumen
se les suministran abundantes solutos y no plasmático circulante, así como hipertermia por la
suficiente agua. El exceso de solutos en el deshidratación. La oliguria es característica y la
túbulo renal provoca una poliuria osmótica. orina tiene densidad elevada si la función renal es
9. Coma diabético hiperosmolar no cetósico (ver buena.
“Coma diabético”). Deshidratación severa: La pérdida de agua es
10. Otras: insuficiencia suprarrenal, diuresis pos- superior al 6 % del peso corporal. A los síntomas
desobstrucción de las vías urinarias, fase anteriores, agravados, se añaden los del sistema
poliúrica de la insuficiencia renal. ner- vioso. El paciente presenta trastornos mentales
y está agitado, con cambios de la personalidad, a
Fisiopatología lo cual siguen desorientación y delirio, con estado
La pérdida de agua provoca una hipernatremia rela- poste- rior de coma y muerte por paro respiratorio.
tiva y una hipertonía del plasma, y por ósmosis el Exámenes complementarios
agua se mueve del espacio intracelular (EIC) al ex- Hematócrito: Está aumentado.
tracelular (EEC), lo que deshidrata las células. Tan- Orina: Tiene un peso específico elevado, en au-
to la hipertonía del plasma como la deshidratación sencia de lesión renal.
celular desencadenan el mecanismo de la sed. Na plasmático: Permite clasificar la deshidrata-
La disminución del volumen plasmático circulante ción en hipertónica (Na > 150 mmol/L), isotónica
(VPC) por la eliminación de agua, causa un aumen- (Na 130 a 150 mmol/L) o hipotónica (Na < 130
to de la secreción de aldosterona con mayor reab- mmol/L).
sorción de sodio, que incrementa la hipertonía, y ésta,
a su vez, la secreción de hormona antidiurética, con Tratamiento
mayor reabsorción de agua, y se produce oliguria Los métodos para restituir la pérdida de agua son
(Fig. 2.1). varios. A continuación se explican los más
recomen- dables.
Cuadro clínico En caso de que se disponga de un ionograma,
Los síntomas varían según el grado de deshidrata- que en modo alguno el médico deber esperar para
ción. orien- tarse ante su paciente e indicar una
Deshidratación ligera: La pérdida de agua es sólo de terapéutica de urgencia, se puede aplicar la fórmula
un 2 % del peso corporal. Su único síntoma es la sed. siguiente:
ATC1 . Na1 = ATC2 . Na2

39
donde: Deshidratación severa .......... 3 200 ml/m2 de
ATC1: agua total del cuerpo, normal. superficie corporal.
Na1: natremia normal.
ATC2: agua que tiene el paciente.
Na2: natremia del paciente.
Ejemplo: Un paciente deshidratado, con 70 kg de HIPERNATREMIA
peso y 160 mmol/L de sodio plasmático.
(HIPEROSMOLARIDAD)
60 . 70 La hipernatremia (sodio mayor de 150 mmol/L) es
ATC1 = = 42 L la expresión clínica del estado de hiperosmolaridad
100
causada por la pérdida de agua o por la ganancia de
ATC1(42) . Na1(140) = ATC2(x) . Na2(160) sodio. De estas causas sólo describiremos la prime-
42 . 40 ra, por ser la más frecuente.
x= = 36,7 Esta hipernatremia, cuando es sintomática, se
160
aso- cia a una elevada morbilidad y mortalidad,
Por lo tanto, 42 - 36,7 = 5,3 L de agua que ha que al- canza del 40 al 70 % en dependencia de su
perdido el paciente. magnitud y de la rapidez de su instalación.
Cuando no se dispone de un ionograma, se pue-
den utilizar cualesquiera de los dos métodos que se Clasificación
explican a continuación. Una forma de clasificar las hipernatremias es rela-
Uno de ellos se basa en el grado de deshidrata- cionándolas con el volumen líquido del organismo.
ción. Si sólo existe sed (deshidratación ligera), el
paciente ha perdido el 2 % del peso corporal. Así, a. Hipernatremia normovolémica.
en el caso anterior: 1. Hipodipsia primaria o secundaria
2 . 70
= 1,4 L (geriátrica). Por mal funcionamiento del
100 osmostato hi- potalámico.
Cuando hay signos de deshidratación moderada, 2. Hipernatremia esencial u osmostato repro-
la pérdida de agua es el 6 % del peso corporal. Por gramado.
lo tanto, siguiendo con el mismo paciente: 3. Incremento del umbral del osmostato para
6 . 70 el mecanismo de la sed (Normal: 290 a
= 4,2 L 295 mosm/L) y la secreción de arginina
100
vasopre- sina (Normal: > 280 mosm/L),
Si se trata de una deshidratación severa, se calcula pero con res- puesta adecuada al estímulo
entre el 7 y el 10 % del peso corporal. hemodinámico.
. 709 4. Incremento de las pérdidas insensibles (fie-
= 6,3 L bre, hiperventilación).
100
5. Diabetes insípida.
El otro método, muy utilizado en la práctica dia- b. Hipernatremia hipovolémica (deshidratación
ria, consiste en calcular la cantidad de agua que hay hipertónica).
que administrar según el área corporal del paciente, Son las mismas que se relacionaron anterior-
también partiendo del grado de deshidratación. El mente en la pérdida de agua.
área corporal se obtiene multiplicando el peso en c. Hipernatremia hipervolémica (intoxicación por
libras del enfermo por la constante 0,012. Por ejem- Na).
plo, un paciente de 150 libras tiene una superficie 1. Administración excesiva de bicarbonato de
corporal de 150 . 0,012 = 1,8 m2. sodio en el tratamiento de la acidosis meta-
bólica, de solución salina al 3 % durante la
Deshidratación ligera .......... 2 000 ml/m de
2 reanimación o de NaCl hipertónico en la hi-
superficie corporal. ponatremia.
Deshidratación moderada ... 2 400 ml/m de 2 2. Excepcionalmente, en la ingestión de gran-
superficie corporal. des cantidades de sales de sodio.
40
Resulta conveniente diferenciar entre las causas mosm/L = 2 (Na + K) + glicemia (en mmol/L)
agudas y crónicas de hipernatremia. Entre las pri- + urea (en mmol/L) o
meras se encuentran la deprivación de agua, la ex- mosm/L = 2 (Na + K) + glicemia (en mg %) +
posición a cargas de solutos, el coma diabético 18
hiperosmolar y el uso de diuréticos osmóticos. En- urea (en mg %)
tre las segundas están la diabetes insípida, el síndro- 6
me de Conn y el de Cushing con tratamiento diurético
asociado. Límites de normalidad: 290 a 310 mosm/L.
La brecha osmolar se calcula mediante:
Fisiopatología Brecha osmolar = Osmolaridad medida -
En cualquiera de las situaciones mencionadas se pro- osmolaridad calculada
duce un aumento relativo de sodio en los líquidos Límites de normalidad: < 10 mosm/L (5 a 8
orgánicos y, por lo tanto, una hipernatremia. mosm/L). La osmolaridad aumentada y la brecha
Cuadro clínico osmolar
Los síntomas propios de la hipernatremia son ines- mayor de 10 mosm/L, permiten identificar otro
pecíficos y dependen tanto de la propia hipertonici- soluto efectivo en el plasma, como el manitol o el
glicerol, u otro soluto inefectivo, como el etanol, el
dad (sed intensa sin signo del pliegue cutáneo o éste
metanol o el etilenglicol.
es suculento), como de la rapidez de su instalación.
Si la función renal es adecuada, el sodio urinario
Entre ellos predominan los del sistema nervioso cen-
es menor de 10 mmol/L y la osmolaridad urinaria
tral (hiperventilación central, estado mental altera-
mayor de 700 mosm/L. Si las pérdidas son de ori-
do, náuseas, convulsiones, nistagmo), pero si las gen renal, el sodio urinario es superior a 20
manifestaciones de deshidratación neuronal son im- mmol/L y la osmolaridad urinaria está
portantes, pueden producirse desgarros vasculares y
inapropiadamente baja. Tratamiento
hemorragias intracraneales. En caso de hipernatre-
mia crónica, el organismo evita la deshidrataciónEl tratamiento de la hipernatremia como tal se basa
neuronal severa mediante la captura de aminoáci- en dos aspectos fundamentales: a) detener la pérdi-
da de agua mediante el tratamiento de la afección
dos, polioles, metilaminas y otros osmoles idiogéni-
cos no bien identificados, que migran al espacio causal y b) corregir la depleción de volumen. Esta
última se realizará por medio de la vía oral cuando
intracelular. Entre los síntomas extracraneales se en-
ello sea factible, o mediante la administración de
cuentran: acidosis metabólica, hiperglicemia (por re-
agua a través de una sonda nasogástrica. En pacien-
sistencia periférica a la insulina) y mioclonos de los
tes con íleo paralítico o retención gástrica, puede
miembros.
utilizarse por vía EV la solución salina fisiológica
Exámenes complementarios al 0,9 % (153 mmol/L de Cl y Na), que es ligera-
mente hipertónica en relación con el plasma, pero
Sodio plasmático: Está elevado, por encima de que puede ser hipotónica en relación con el nivel
150 mmol/L. de Na plasmático que presente el enfermo. Otra
Glicemia: Puede estar elevada. alter- nativa es la solución salina al 0,45 %, que
Osmolaridad plasmática: Puede medirse mediante aporta la mitad de los electrólitos y, por lo tanto,
un osmómetro o calcularse por la fórmula de mayor can- tidad de agua libre.
Nicholson y colaboradores: La corrección del déficit de agua requiere casi
siempre varios días y con una rapidez de infusión
mosm/L = 2 . Na plasmático + glicemia (en que produzca una reducción de la osmolaridad no
mmol/L) o mayor de 2 mosm/h, o de 1 a 1,5 mmol/L/h en las
mosm/L = 2 . Na plasmático + cifras de Na. Si la corrección se hace con una rapi-
glicemia (en mg %) dez mayor que la recomendada, en los estados
18 hiperosmolares crónicos pueden provocarse un ede-
o mediante la de Jackson y Forman: ma cerebral severo y convulsiones, a consecuencia
de la retención líquida por los osmoles idiogénicos
intracelulares.
41
El tratamiento debe tener como objetivo suprimir La hiponatremia tiene una prevalencia estimada
las manifestaciones clínicas, reducir el nivel de Na a del 2,5 % y constituye el trastorno electrolítico más
148 mmol/L o lograr en 24 h una disminución no frecuentemente observado en la población hospita-
mayor de 20 a 25 mmol/L en las cifras iniciales. laria.
La cantidad de líquido que se debe administrar Las situaciones que se acompañan de hiponatre-
en 24 h para alcanzar estos objetivos, se calcula me- mia hipotónica, como expresión clínica del estado
diante la fórmula siguiente: de hiposmolaridad, son varias y se pueden agrupar
litros = peso en kg . 0,6 . como sigue:
(Na medido - 148)
Na medido 1. Hiponatremia hipotónica con sodio total bajo
En el caso de la casi siempre yatrogénica “intoxi- y volumen extracelular disminuido.
cación por Na”, la eliminación de este catión puede • Pérdida real de sodio.
acelerarse con la administración de furosemida, pero 2. Hiponatremia hipotónica con sodio total nor-
entonces debe de incrementarse la ingestión de lí- mal y volumen extracelular casi normal.
quidos según la respuesta diurética. • Intoxicación aguda por agua.
El tratamiento dialítico está indicado en las hi- • Hiponatremia crónica.
pernatremias que se acompañan de edema pulmo- 3. Hiponatremia hipotónica con sodio total
nar o de insuficiencia renal. aumen- tado y volumen extracelular
aumentado.
• Hiponatremia dilucional.
HIPONATREMIA Pérdida real de sodio
(HIPOSMOLARIDAD) Etiología
Por lo general hay pérdida de sodio y agua, pero
En clínica se acostumbra utilizar el término hipona- la de sodio es mucho mayor que la de agua. Son
tremia como sinónimo de pérdida de sodio, cuando causas frecuentes de eliminación de sodio, las si-
en realidad sólo expresa una disminución del sodio guientes:
plasmático en relación con el volumen sanguíneo
circulante, mientras que el sodio total del organis- 1. Vómitos y diarreas, sobre todo cuando se
mo puede estar normal, aumentado o reducido. Es orde- nan jugos de frutas y refrescos que no
decir, que una cifra disminuida de sodio en el plas- contie- nen sodio, como medida para restituir
ma no significa siempre que este elemento se ha la pérdida de líquido.
perdido, sino que ha variado su proporción en rela- 2. Sudaciones profusas, particularmente cuando
ción con el plasma y el líquido extracelular. Tanto se ingiere mucha agua o refrescos, que repo-
en un caso como en el otro se produce un estado de nen el líquido, pero no la sal eliminada.
hipotonía o hiposmolaridad del plasma. 3. Por efecto de diuréticos indicados de forma
Se denomina seudohiponatremia a la condición in- debida o no controlados.
en que las cifras de sodio están disminuidas, pero la 4. Insuficiencia suprarrenal crónica, por falta de
osmolaridad medida resulta normal o elevada. mineralocorticoides.
5. Algunas nefritis, particularmente las que adop-
CAUSAS DE SEUDOHIPONATREMIA tan la forma clínica llamada perdedora de sal.
a. Con osmolaridad plasmática normal.
• Hiperlipemia. CAUSAS DE PÉRDIDA REAL DE SODIO
• Hiperproteinemia. a. Pérdidas renales.
b. Con osmolaridad plasmática aumentada. • Exceso de diuréticos.
• Hiperglicemia. • Insuficiencia suprarrenal primaria.
• Infusión de manitol o glicerol. • Nefritis perdedoras de sal.
• Contrastes radiográficos (diatrizoato de sodio). • Acidosis tubular renal proximal.

42
b. Pérdidas extrarrenales. Desaparece la turgencia de la piel (signo del
• Pérdidas gastrointestinales. pliegue cutáneo) porque el líquido intersticial pasa
• Vómitos con alcalosis metabólica. al espa- cio intracelular.
• Diarrea. Pérdida intensa de sodio (50 g de déficit): Se
• Quemaduras extensas. pre- senta estupor, al cual sigue un estado de coma.
• Efecto de tercer espacio. Hay hipotonía muscular y arreflexia osteotendinosa.
• Pancreatitis, peritonitis, íleo paralítico, Pue- den aparecer manifestaciones de déficits
traumatismo muscular. neurológi- cos focales y parálisis seudobulbar. El
cuadro de shock es manifiesto.
Por supuesto, también la falta de ingestión puede
Exámenes complementarios
provocar un cuadro de depleción de sodio.
Sodio plasmático: Está disminuido, por debajo de
Fisiopatología
130 mmol/L.
La pérdida de sodio ocasiona disminución de la pre- Osmolaridad plasmática: Menor de 285 mosm/L.
sión osmótica del plasma, por lo cual el agua fluye Hematócrito: Normal o aumentado.
del espacio extracelular al intracelular y de este modo Urea: Está normal o aumentada, según la inten-
se equilibran las presiones. Asimismo, esta hipoto- sidad del cuadro.
nicidad del plasma inhibe la secreción de hormona Orina: Hay ausencia de sodio en la orina. Si éste
antidiurética, y en consecuencia aumenta la diure- es mayor de 20 mmol/L en la orina, el paciente está
sis. Ambos mecanismos reducen el volumen plas- recibiendo tratamiento diurético, hay una diuresis
mático circulante hasta niveles de shock en los casos osmótica, una insuficiencia renal o una bicarbona-
graves. turia por alcalosis metabólica.
Esta disminución reduce a su vez la filtración glo-
merular, con retención de urea. Además, estimula la Tratamiento
secreción de aldosterona con mayor reabsorción de
Deben incluir el de la noxa causal y el de la hipona-
sodio.
tremia. Para la corrección de la hiponatremia se si-
Cuadro clínico guen las siguientes orientaciones, que evitan las
complicaciones:
Los síntomas fundamentales son cefalea, astenia y
lasitud, hipotensión postural y cuadro lipotímico. 1. Los niveles de Na no deben incrementarse
También se presentan calambres musculares y pares- más de 20 a 25 mmol/L/h por encima de los
tesias. Si el cuadro es severo, habrá confusión men- valores iniciales durante las primeras 48 h
tal. Los síntomas pueden agruparse en tres etapas, del trata- miento.
según la intensidad de la pérdida de sal. 2. No resulta recomendable normalizar los valo-
Pérdida moderada de sodio (20 g de déficit): El res de sodio en la fase inicial de la terapéutica.
síntoma fundamental es la astenia, que en estos ca- Se establece un valor de sodio de 130 mmol/L
sos adquiere significación diagnóstica. El enfermo como el objetivo que se debe alcanzar.
se encuentra apático y desinteresado, está anoréxico
y se queja de una cefalea pulsátil. La sed no es fre- La concentración plasmática de sodio está influi-
cuente. Pueden presentarse calambres musculares,
da por varios factores, y por tal motivo, las
sobre todo si se bebe agua.
determi- naciones de la natremia no ofrecen
Pérdida manifiesta de sodio (35 g de déficit): A
necesariamente una información exacta acerca del
los síntomas anteriores se añade una profunda de-
balance del esta- do del sodio orgánico. Sin
bilidad (lasitud) que domina el cuadro, así como
náuseas y vómitos. La cefalea se hace más continua embargo, en la práctica se puede lograr un cálculo
e intensa. Aparecen signos de colapso vascular pe- aproximado de la canti- dad de sodio que hay que
riférico: taquicardia con pulso débil, desvanecimien- administrar al paciente, restando la cifra de este
to y, sobre todo, hipotensión postural, que al igual elemento que él tiene en sangre de la cifra normal,
que la astenia, tiene gran importancia diagnóstica. y esto da el déficit de sodio por litro. Multiplicando
éste por el agua total del cuerpo, se obtiene el
déficit total de sodio.
43
Ejemplo: Un paciente con 70 kg de peso y 120 me de desmielinización osmótica, también conoci-
mmol/L do como mielinolisis central pontina. Descrito por
de sodio plasmático: Adams y Mancall en 1959, no es hasta 1970 que se
establece su relación con la corrección de la
140 (Na normal) - 120 (Na patológico) = 20 mmol/L hipona- tremia. Se presenta de forma más
70 . 60 frecuente en pa- cientes alcohólicos y
= 42 L de agua corporal total malnutridos, de 3 a 5 días después de la
100 corrección de una hiponatremia, en la que los
Déficit total de sodio: 20 . 42 = 840 mmol valores de sodio plasmático se normalizaron más
o expresado en miligramos: 840 . 23 = 19 320 mg. rápido de lo que anteriormente se ha recomen-
Nótese que el cálculo se hace en relación con el dado. Aparecen manifestaciones corticobulbares,
agua total del cuerpo y no sólo con la corticospinales y cerebrales que llevan al mutismo
extracelular, que es donde principalmente está y a la disfasia, así como a la cuadriparesia
contenido el sodio. Esto se debe al movimiento espástica, la parálisis seudobulbar, el delirio y la
osmótico del agua hacia las células que provoca muerte. A pesar de que no existe una terapéutica
la hiponatremia, de manera que si se administra específica para ella, el paciente puede recuperarse,
sodio teniendo sólo en cuenta el agua pero con una dis- función neurológica residual que
extracelular, el nuevo movimiento osmótico, a veces incluye el estado vegetativo persistente.
ahora hacia afuera de las células, volvería a diluir
el
Hiponatremia dilucional
plasma. Para la mayoría de los autores es el tipo más fre-
Cuando la depleción de sodio va acompañada de cuente de hiponatremia que se atiende en las salas
pérdida abundante de agua (depleción mixta de agua de los hospitales. Se manifiesta por lo general en
y sodio), su restitución se hace con solución salina pacientes edematosos (cardíacos, hepáticos, renales)
fisiológica al 0,9 %, que contiene 9 g de NaCl/L de en fase avanzada de la enfermedad, que tienen difi-
cultad para la eliminación de agua y presentan co-
solución (Na: 153 mmol y Cl: 153 mmol/L). Cuando
múnmente un sodio total orgánico aumentado. La
se trata de una pérdida “pura” de sodio, como es el
insuficiencia cardíaca se encuentra entre sus causas
caso del paciente con una depleción de sodio que ha
más frecuentes.
sido tratado incorrectamente con suero glucosado, o
La fisiopatología de este cuadro no se conoce
cuando por algún motivo (insuficiencia renal agu- bien. Parece tratarse de un proceso multifactorial,
da) no sea recomendable administrar grandes canti- donde la dificultad para la eliminación del agua
dades de líquido, habrá que recurrir a la solución unida a la sobrehidratación crónica por ingestión
salina al 3 % (150 ml de cloruro de sodio hipertónico libre de lí- quidos, tiene una gran importancia.
al 20 % en 850 ml de agua para inyección = 513 Se ha postulado también que hay una salida del
mmol de Na en 1 L). potasio de las células con disminución de la presión
La cantidad de solución salina al 3 % necesaria osmótica intracelular. Esta disminución provoca la
para suministrar la cantidad de sodio calculada, es salida del agua de las células hacia el espacio
la siguiente: extra- celular con la consiguiente hemodilución. A
ml NaCl 3 % = 1 000 . mmol de Na calculados esto se agrega la retención de líquidos por la
513 dificultad que tiene el paciente para eliminarlos,
Esta solución debe administrarse a un ritmo de y, además, una mayor liberación de hormona
infusión que no aumente el sodio plasmático más antidiurética causada por la relativa hipertonicidad
de 1 a 1,5 mmol/L/h. del espacio extracelu- lar en relación con el
La aplicación EV directa de cloruro de sodio hi- intracelular.
pertónico al 20 % (ámpulas de 20 ml con 4 g Independientemente de las manifestaciones propias
de NaCl) cada día tiene menos indicaciones, por no de la enfermedad de base (insuficiencia cardíaca,
decir ninguna. Su administración en la vena debe cirrosis hepática), el paciente puede estar asintomá-
ser muy lenta, preferiblemente diluido o con la apli- tico o presentar astenia marcada y síntomas de in-
cación simultánea de calor en el sitio de la inyec- toxicación acuosa (letargia, estado confusional,
ción, pues es muy irritante. náuseas, vómitos y rara vez convulsiones). Faltan
Entre las complicaciones de la corrección intem-
pestiva de la hiponatremia, se encuentra el síndro-
44
los síntomas de insuficiencia circulatoria periférica incrementan la liberación de ADH en determinados
característicos de la pérdida real de sodio, aunque enfermos, o que aumentan la sensibilidad renal a
estarán presentes los de la enfermedad de base. ésta.
El sodio plasmático está disminuido, a veces mar-
cadamente, sin que aparezcan los síntomas que ca- MEDICAMENTOS QUE PUEDEN
PROVOCAR HIPONATREMIA
NORMOVOLÉMICA
bría esperarse ante tal situación (se dice que el
osmostato del cuerpo regula la presión osmótica a • Vasopresina. • Inhibidores de la
un nivel inferior al normal, al cual el organismo se • Oxitocina. monoaminoxidasa.
adapta). Hay ausencia de sodio en la orina. • Ciclofosfamida. • Antidepresivos tricíclicos.
El tratamiento consiste en disminuir la ingestión • Clofibrate. • Antinflamatorios
de líquidos a menos de un litro diario. Se ha reco-
• Clorpropamida no esteroideos.
mendado el manitol como diurético osmótico y los
diuréticos de asa (furosemida, bumetanida), porque • Carbamazepina.
aumentan el aclaramiento del agua libre. Los corti- Algo similar sucede durante el trabajo de parto y
costeroides ayudan, como antagonistas de la hormo- el parto con la administración de oxitocina (que po-
na antidiurética, aunque sus efectos son transitorios. see actividad ADH), y que puede ser mal indicada
Si hay hipocaliemia, debe corregirse. En los casos en soluciones glucosadas libres de electrólitos.
severos, un tratamiento depurador extrarrenal pue- Los diuréticos del tipo tiazídico en ocasiones de-
de extraer varios litros de líquido al paciente y re- sarrollan este cuadro por el mecanismo de la deple-
solver transitoriamente la situación. El tratamiento ción de volumen y el estímulo de la ADH asociado
con sodio no está indicado en la hiponatremia al mecanismo de la sed, y a una disfunción del seg-
dilucional. mento diluyente del asa de Henle.
La insuficiencia renal aguda, a causa de la oli-
Intoxicación acuosa goanuria que la acompaña, es terreno propicio para
Se trata de un estado hipotónico agudo grave que se la instalación de este síndrome.
desarrolla en menos de 24 horas de evolución, antes Esta afección también se observa en la adminis-
que se produzca la regulación osmolar del volumen tración exógena de ADH, en la ingestión
celular. Se presenta en forma yatrógena cuando se compulsiva de líquidos (agua o cerveza) y en las
suministra agua o soluciones glucosadas sin elec- intoxicaciones hídricas voluntarias.
trólitos en grandes cantidades, a pacientes que por En el orden fisiopatológico, el exceso de agua
algún motivo tienen dificultad con la excreción re- dis- minuye la presión osmótica extracelular, por lo
nal de agua. cual aquella fluye hacia el interior de las
Existen pocas situaciones clínicas en las que ocurre, células, las imbibe y equilibra las presiones. El
como pueden ser la polidipsia psicógena, la insufi- encéfalo se ex- pande hasta los límites de su
ciencia de glucocorticoides, el hipotiroidismo, el estuche óseo inexten- sible, lo cual explica los
período posoperatorio inmediato, en que suelen con- síntomas cerebrales
comitar factores tales como el dolor, las náuseas y (encefalopatía hiponatrémica). La reducción de la
la administración de opiáceos, lo que produce libe- presión osmótica extracelular inhibe la secreción de
ración no osmótica de ADH, junto a la administra- ADH, pero este efecto es contrarrestado, bien por-
ción de soluciones hipotónicas, tal y como sucede que existe una secreción exagerada de ésta
en la resección transuretral de la próstata, la abla- (posope- ratorio), o porque hay una
ción por láser del endometrio y la litotripsia ultra- imposibilidad para elaborar orina (insuficiencia
sónica, en las que se requiere de soluciones libres renal aguda), de ahí que no se produzca la diuresis
de electrólitos en la irrigación del campo operatorio.
necesaria. La expansión del espacio extracelular
Los pacientes con trastornos psiquiátricos se en-
inhibe la secreción de al- dosterona, pero la
cuentran también en riesgo de hiponatremia aguda,
pérdida de sodio que así tiene lu- gar no puede
ya que en la neuroquímica del estado psicótico agu-
arrastrar el correspondiente volumen de agua por
do se encuentra el aumento de los niveles de ADH.
Existen drogas psicotrópicas o no, que también las causas antes explicadas.
El examen físico muestra una piel húmeda, con
frecuencia edematosa. El paciente presenta cefalea,
náuseas, vómitos y estertores crepitantes en los

45
pulmones, y en los casos severos, sudación marca- CUADRO 2.1
CAUSAS DEL SÍNDROME DE SECRECIÓN
da, lagrimeo, salivación, edema de la conjuntiva INADECUADA DE ADH
ocular e incluso edema agudo pulmonar. La conducta
anormal, que siempre predomina y puede ser el modo a. Enfermedades pulmonares:
de comienzo del cuadro, incluye pérdida de la aten- • Neumonía • Asma bronquial grave
ción, confusión, somnolencia o gritos y delirio. A • Tuberculosis • EPOC
veces hay convulsiones. • Aspergilosis • Ventilación mecánica
El sodio plasmático está muy disminuido, tanto
b. Trastornos del sistema nervioso:
más cuanto mayor sean el exceso de agua y la • Meningoencefalitis • S. de Guillain-Barré
hemodilución. Las cifras por debajo de 120 mmol/L • Absceso cerebral • Trombosis del seno cavernoso
son de mal pronóstico, aunque la gravedad del cua- • Traumatismo craneal • Esclerosis múltiple
dro suele depender más de la agudeza de su instala- • Hematoma subdural • Porfiria intermitente aguda
ción, que de la concentración de sodio en el plasma. • Hemorragia • Psicosis aguda
La intoxicación hídrica constituye una urgencia subaracnoidea • Delirium tremens
• AVE • Hidrocéfalo
médica y tiene una alta mortalidad. Hay que supri- • Tumores
mir todo aporte líquido, y en los ancianos y cardió-
patas conviene añadir furosemida por vía EV a este c. Tumores:
tratamiento, con el fin de prevenir la sobrecarga de • Carcinoma • Mesotelioma
broncogénico • Carcinoma de la vejiga
la circulación. Debe de suprimirse todo medicamento
• Adenocarcinoma del • Carcinoma prostático
que potencialmente actúe como desencadenante. Los páncreas y duodeno • Timoma
métodos de depuración extrarrenal constituyen una • Linfoma
medida de gran utilidad, muchas veces salvadora,
en la intoxicación acuosa. d. Medicamentos (además de los que pueden provocar hi-
ponatremia normovolémica):
• Opiáceos • Barbitúricos
Síndrome de secreción • Anestésicos generales

inadecuada de hormona e. Otros:


• Ventilación a presión • Náuseas
antidiurética (SSIHAD) positiva • Stress
• Dolor
Es causa muy frecuente de hiponatremia en los pa-
cientes hospitalizados y se observa: a) por secre- A diferencia de lo que sucede en la hiponatremia
ción persistente de arginina/vasopresina en ausencia dilucional, los edemas son raros, ya que el líquido
de un estímulo fisiológico, b) por una mayor sensi- retenido se mueve hacia el interior de las células.
bilidad del tubo colector a la ADH, o c) por su pro- Es por ello que son comunes la cefalea, astenia,
ducción ectópica (péptidos con actividad can- sancio fácil, anorexia, náuseas y vómitos, y
antidiurética). Como consecuencia de ello, la excre- trastor- nos mentales: el paciente puede parecer
ción de agua libre por el riñón disminuye, lo que confuso, agitado o violento. A veces se presentan
propicia que una ingestión normal o limitada de ésta convulsio- nes. En el examen físico la piel conserva
dé lugar a la instalación de una progresiva hipotoni- la turgencia normal y no hay signos de
cidad. El diagnóstico se sospecha ante un paciente insuficiencia circulato- ria periférica. En otras
normovolémico con una elevada concentración oportunidades el enfermo está asintomático.
osmótica urinaria (mayor de 100 mosm/L), porta- Además del tratamiento de la entidad causal, la
medida más eficaz en el manejo del SSIHAD es la
dor de una hiponatremia hipotónica (hiponatremia
restricción de líquidos a menos de un litro diario. Si
con sodio mayor de 20 mmol/L en orina). Las fun-
esto no es bien tolerado, se añade la
ciones tiroidea y suprarrenal deben ser normales.
demeclociclina, que bloquea la reabsorción de agua
Sus causas más frecuentes se encuentran en el
en el tubo colec- tor mediada por la
cuadro 2.1. arginina/vasopresina. Si es nece- sario administrar
solución salina al 3 %, debe hacerse
46
a un ritmo de infusión de 1 a 2 ml/kg/h, lo que in- Cuadro clínico
crementa el sodio plasmático en 1 a 2 mmol/L/h.
Como esto es capaz de provocar una sobrecarga En el cuadro clínico se combinan los síntomas de la
aguda de líquidos en el espacio vascular, se acos- pérdida de agua y los de la depleción de sodio, aun-
tumbra a asociarla a diuréticos de asa, como la que predominan los primeros. Es importante recor-
furosemida. dar que la hipovolemia no se hace clínicamente
manifiesta mientras las reducciones no superen del
Depleción mixta de agua 10 al 20 % del volumen intravascular. Son notables
la sed, la debilidad y la sequedad de la piel y las
y sodio (hipovolemia) mucosas. A medida que disminuye el volumen
san- guíneo circulante, aparecen taquicardia,
Es el cuadro que con mayor frecuencia se presenta hipotensión arterial y otros signos de colapso
en la práctica y se debe a la pérdida de agua y sodio vascular periférico. Exámenes
en igual proporción. Sin embargo, es común que la
eliminación de agua supere a la de sodio, ya que la complementarios
mayoría de las secreciones orgánicas son isotónicas Sodio plasmático. Está normal o elevado, acorde
o hipotónicas, y las pérdidas diarias obligatorias, que con la pérdida de agua.
continúan, están formadas casi exclusivamente por Hematócrito. Está elevado a causa de la hemo-
agua. concentración.
Equilibrio acidobásico. Presenta alteraciones se-
Etiología gún la causa de las pérdidas.
Son causas de depleción mixta los vómitos, las Urea. Puede estar elevada.
diarreas, las fístulas gastrointestinales, la obstruc-
ción intestinal y la acidosis diabética. En el caso de Tratamiento
la oclusión intestinal, además de los vómitos, se pier- Consiste en la restitución del agua y el sodio perdi-
de una gran cantidad de líquido en la luz intestinal dos, así como la regulación de las alteraciones pre-
(efecto de “tercer espacio”). sentes del equilibrio acidobásico. La reducción de
Otras causas se encuentran en la sepsis, los que- agua se calcula por medio de cualquiera de los mé-
mados, en determinadas dermopatías graves, los todos ya explicados y su restitución se hará con so-
politraumatismos, la fascitis necrotizante y la cirro- lución salina fisiológica al 0,9 %, ya que hay que
sis hepática. reponer agua y sodio en forma isotónica. También
pueden utilizarse los coloides y la sangre, tal y
Fisiopatología como se especifica en el tema de “Shock” en el
Por las razones antes explicadas, el agua se mueve epigrafe sobre shock hipovolémico.
del espacio intracelular al extracelular, con deshi- Según la vía por donde se hayan producido las
dratación celular y reducción del volumen extrace- pérdidas (vómitos, diarreas), se suministrarán los
lular y del plasma circulante, lo que conduce a un electrólitos. Por ejemplo, en el caso de las diarreas,
gasto cardíaco disminuido y retención renal de sodio generalmente se suministra potasio, según se expli-
y agua, aunque puede aparecer hiponatremia por li- ca en el capítulo siguiente. Lo mismo se puede
beración no osmógena de ADH. decir de las alteraciones del equilibrio acidobásico
(ver capítulo correspondiente).
47
3

ALTERACIONES DEL POTASIO


El potasio es el más importante de los cationes in- Homeostasis del potasio
tracelulares e ingresa en el organismo formando parte Ésta se logra mediante mecanismos renales y ex-
de los alimentos en una proporción muy variable. trarrenales.
Su ingestión diaria alcanza entre 50 y 150 mmol. Homeostasis renal del potasio. Está
La cantidad total de potasio en el organismo es primariamente influida por:
de unos 3 500 mmol (aproximadamente 50 mmol/kg
de peso corporal) y de este total se renueva a diario 1. La cantidad de potasio ingerido con la dieta y
alrededor del 5 %. Su distribución es la siguiente: su nivel plasmático, pues estimulan la secre-
ción del catión a nivel de las porciones media
Células musculares 3 000 mmol y distal del túbulo contorneado distal y de los
Hígado 200 mmol tu- bos colectores.
Hematíes 230 mmol 2. La cantidad de sodio, de aniones pobremente
Espacio extracelular 70 mmol reabsorbibles y de agua transportados a las
por- ciones secretoras del potasio en el riñón,
Como se observa, de esta cantidad sólo 70 mmol pues al incrementarse aquéllos, aumenta la
(2 %) se encuentran en el espacio extracelular; el res- secreción de éste.
to (98 %) está dentro de las células, fundamental- 3. El balance acidobásico (ver más adelante).
mente las musculares, que albergan la casi totalidad 4. La acción de la aldosterona, que favorece la
de dicho elemento. La elevada concentración intra- reabsorción de sodio y la secreción renal de
celular de potasio depende del equilibrio iónico a potasio.
nivel de la membrana celular por intermedio de la
Homeostasis extrarrenal del potasio. Se logra
bomba de Na+/K+, mecanismo activo que remueve
mediante:
de forma constante el sodio de las células y obliga
al potasio a entrar en ellas. En condiciones norma- 1. El balance acidobásico.
les, las cifras de potasio intracelular y extracelular 2. La acción de la insulina, que intensifica la en-
son bastantes estables, ya que tiene lugar un paso trada del potasio al interior celular,
constante de dicho ion de la célula al espacio extra- independien- temente de la de glucosa.
celular y viceversa. 3. La acción de la aldosterona, que acrecienta la
Las pérdidas de potasio, que por supuesto igua- secreción enteral y sudoral de potasio.
lan a los ingresos, se producen principalmente por 4. La actividad simpática adrenérgica, pues los
el riñón (88 al 92 %), ya que existe un intercambio estímulos beta-2-adrenérgicos aumentan la en-
de sodio por potasio e hidrogeniones (de estos dos trada del potasio a las células.
últimos se intercambia con el sodio el que se en-
cuentre en mayores proporciones). El resto se eli- Funciones del potasio
mina por las heces fecales (8 a 12 %), aunque, por
supuesto, estas últimas pueden aumentar en caso 1. Mantiene la osmolaridad intracelular.
de diarreas. Una cantidad exigua se pierde por el 2. Mantiene la electroneutralidad en virtud de la
sudor. gran cantidad de proteína intracelular.

48
3. Participa en el funcionamiento adecuado de las La concentración del potasio extracelular puede
enzimas intracelulares. estar normal o elevada en presencia de una deple-
4. Interviene en la conducción del impulso ner- ción potásica si ésta se acompaña de una reducción
vioso, tanto en los reflejos voluntarios como del volumen extracelular, como por ejemplo, en la
involuntarios. Su aumento o disminución inhibe acidosis diabética o en otras deshidrataciones. Por
dicha conducción. el contrario, en el caso de una sobrehidratación, el
5. Influye en el buen funcionamiento de los potasio sérico estará disminuido, aun cuando sus
músculos esqueléticos. can- tidades totales se encuentren elevadas. Todo
6. Contribuye al mantenimiento del peristaltismo esto con- firma que la medición del potasio sérico
intestinal. tiene un valor relativo en estados patológicos.
7. Posee acción anticurare.
8. Influye en el buen funcionamiento del múscu-
lo cardíaco. Su aumento produce paro cardía- HIPERCALIEMIA
co en diástole por reducción de la excitabilidad
miocárdica, y su disminución, paro cardíaco en Se define como un valor plasmático superior
sístole por incremento de la irritabilidad mio- a 5,5 mmol/L; se clasifica como moderada la hi-
cárdica. percaliemia de 5,5 a 6 mmol/L; grave, la hiperca-
9. Interviene directamente en el equilibrio acido- liemia entre 6 y 7 mmol/L, y muy grave, la superior
básico y en el pH de la sangre, puesto que su a 7 mmol/L. Un informe del laboratorio con un
disminución extracelular provoca la migración valor aislado que supera el límite en ausencia de
del potasio intracelular al espacio extracelular. factores de riesgo o de manifestaciones clínicas,
debe hacer- nos repetir el examen complementario
Esto último ocurre mediante un intercambio con
y descartar las causas de seudohipercaliemia
los hidrogeniones, que a su vez escapan del espacio
(cuadro 3.1).
extracelular hacia el interior de las células, lo cual
ocasiona una alcalosis extracelular que siempre va CUADRO 3.1
unida a la hipocaliemia. CAUSAS DE HIPERCALIEMIA
Por otra parte, la alcalosis extracelular se acom-
paña de hipocaliemia, porque en este caso los hidro- a. Excreción renal disminuida:
geniones migran de las células al espacio extracelular • Insuficiencia renal aguda oligúrica.
para corregir la deficiencia, y el potasio va de éste • Insuficiencia renal aguda no oligúrica, severa (filtrado
hacia el interior de las células. En el primer caso la glomerular < 10 ml/min).
orina será neutra o ácida, mientras que en el segun- • Enfermedades renales tubulares distales.
do será alcalina. • Nefritis intersticial aguda, nefropatía sicklémica o por
Por el contrario, la acidosis por ácidos inorgánicos plomo, rechazo del trasplante renal, reflujo y uropatías
obstructivas, necrosis papilar, nefritis lúpica, seudohi-
y en menor grado la orgánica, se acompañan de hi-
peraldosteronismo, Addison.
percaliemia, puesto que los hidrogeniones migran
• Por drogas:
hacia el interior de la célula mediante un intercam-
bio con el potasio intracelular. • Que disminuyen la acción de la aldosterona: heparina,
bloqueadores de la ECA.
A continuación se resumen los mecanismos antes
expresados: • Que inhiben la secreción de potasio: diuréticos (espiro-
nolactona, amiloride, triamterene), litio, trimetoprim.
Espacio Espacio Luz tubular pH • Ambos mecanismos anteriores: AINE, ciclosporina.
extracelular intracelular (orina)
b. Salida del potasio intracelular:
Acidosis —> H+ —> H+ • Acidosis, anoxia, síndromes hiperosmolares, déficit de
(exceso de H+) <— K+ <— Na+ insulina, necrosis celular (hemólisis aguda, transfusión
Alcalosis <— H+ <— Na+ de sangre hemolizada, rabdomiólisis, quimioterapia de
(déficit de H+) —> K+ —> K+ la leucosis, gangrena), por drogas (betabloqueadores,
Hipocaliemia <— K+ <— Na+ agonistas alfa, intoxicación digitálica, relajantes muscu-
(déficit de K+) —> H+ —> H+
lares despolarizantes), parálisis periódica hipercaliémica.
49
c. Carga excesiva de potasio: prolongación del QRS y del intervalo PR, disminu-
• Oral o intravenosa. yen de amplitud las ondas P y R, se profundiza la
• Sustitutos potásicos de la sal. onda S y se deprime el segmento ST. Finalmente,
• Penicilina G potásica. la onda P se reduce hasta desaparecer, se presenta
un ritmo de la unión con arritmia total, y el
d. Seudohipercaliemia: complejo QRS se deforma hasta quedar sustituido
• Muestra de sangre hemolizada. por una onda sinusoidal continua, que anuncia el
• Trombocitosis mayor de 800 000/mm3. paro cardíaco por fibrilación ventricular.
• Leucocitosis mayor de 100 000/mm3. Estos cambios eléctricos no resultan sólo del au-
mento del potasio, sino también de la interacción
Etiología de los iones de sodio, calcio, magnesio e
Los factores responsables de la hipercaliemia son: hidrógeno, ya que los dos primeros actúan como
antagonistas del potasio y los dos últimos, como
1. Excreción renal disminuida. Es la causa más favorecedores de su acción. La precocidad en la
frecuente. Con cifras de diuresis superiores presentación de estos cambios
a 600 ml /24 h y en ausencia de otras causas de electrocardiográficos depende de cada in- dividuo,
aumento del potasio, el riñón puede mantener
pero se observan raras veces con un potasio menor
cifras de caliemia normales.
de 6 mmol/L, y frecuentemente cuando el ni- vel de
2. Salida del potasio intracelular. La salida exa-
gerada de potasio de la célula se ve en el curso potasio es mayor de 8 mmol/L. Tratamiento
de aquellos procesos en los que existe gran El tratamiento de la hipercaliemia comprende
catabolia celular (sepsis), en la anoxia, la aci- diver- sas medidas que buscan incrementar su
dosis y en las grandes destrucciones de tejidos entrada a la célula o aumentar su excreción por
(quemaduras, aplastamientos). vía renal o extrarrenal. Por supuesto, los focos
3. Carga excesiva de potasio. Cuando el ingreso de necrosis, sepsis, condiciones anóxicas, etc.,
de potasio al organismo supera sus posibilida- así como otras causas de hipercaliemia que
des de excreción. Es una causa rara de la en- pudieran estar presen- tes, deben ser eliminadas al
tidad. mismo tiempo que se aplica el tratamiento
específico, que se puede siste- matizar en la forma
siguiente:
Cuadro clínico 1. Suprimir el potasio y evitar su ingestión.
Las manifestasiones clínicas de la hipercaliemia son La falta de sodio en la dieta, las sales
escasas, a menos que sea severa. Por lo general co- potásicas de la penicilina y el potasio de la
mienzan por debilidad muscular y trastornos en la nutrición pa- renteral, no deben ser olvidados.
conducción cardíaca, por lo que su diagnóstico de- 2. Antagonizar la cardiotoxicidad del potasio.
pende más de su determinación sérica (ionograma) Cloruro de calcio al 10 % (1 ámpula) o
y del ECG. La debilidad muscular habitualmente gluco- nato de calcio al 10 %, EV lento: 20
comienza por los miembros inferiores y se extiende ml de la solución cada 2 o 4 h; actúan de
luego a los superiores. Algunos pacientes refieren inmediato y sus efectos duran de 20 a 30 min.
disnea, por debilidad de los músculos respiratorios. Se prefiere el gluconato para evitar la necrosis
Si la hipercaliemia es severa, puede presentarse una de la piel por extravasación del cloruro. Puede
parálisis fláccida, aunque en las de instalación rápi- precipitar una arritmia ventricular grave si el
da han sido notificadas manifestaciones musculares paciente se en- cuentra en intoxicación
tetánicas. La parálisis no ocurre de forma habitual digitálica, o una asis- tolia si se administra
en los músculos inervados por los pares craneales. rápidamente.
El signo eléctrico más precoz de hipercaliemia es la 3. Introducir el potasio en la célula.
aparición de ondas T altas, estrechas y simétricas en Bicarbonato de sodio: 100 a 300 mmol por
las derivaciones precordiales, a lo que le sigue el vía EV en un período de 15 min a 2 h, logran
acortamiento del intervalo QT. Más tarde surge una dis- minuir las cifras séricas de potasio y
corregir la acidosis que la acompaña. Sus
efectos co- mienzan a los 20 min de su
administración.
50
Algunos cuestionan su empleo por la hiperto- mia de 3 a 2,5 mmol/L y grave, la inferior a 2,5
nicidad que puede producir. mmol/L. La concentración de potasio sérico puede
Cloruro de sodio hipertónico: se puede utilizar disminuir, como ya se explicó, independientemente
como bolo EV, aunque con las medidas reco- de que sus cifras totales corporales sean normales
mendadas en el tema de hiponatremia. Tam- o estén au- mentadas o reducidas.
bién es capaz de producir hipertonicidad. Cuando el potasio total corporal está normal o
Insulina simple (10 U): disuelta en 1 ámpula aumentado y existe una hipocaliemia, ésta se
de dextrosa al 50 % para evitar la hipoglice- debe a una dilución del espacio extracelular (hi-
mia, EV, en bolo. La dextrosa al 30 % (500 ml) pocaliemia dilucional) o a la penetración de este
con 1 o 2 unidades de insulina por cada 10 g de catión en las células. Pero cuando las cifras tota-
glucosa, constituye una alternativa. Salbutamol les de potasio se hallan disminuidas, existe una
en aerosol (10 mg) o EV (0,5 mg): por su pérdida de este elemento, y es el caso al que nos
acción beta2 facilita la rápida entrada del referiremos. Las causas de pérdida de potasio son
potasio al interior de la célula. Deben vigi- fundamentalmente las que se presentan en el cua-
larse las taquiarritmias o la angina por su em- dro 3. 2.
pleo.
4. Aumentar la excreción de potasio. Furosemida CUADRO 3.2
u otro diurético de asa: resultan útiles si se CAUSAS DE HIPOCALIEMIA
logra obtener diuresis.
5. Resinas de intercambio catiónico oral o rectal: a. Déficit de ingestión:
intercambian potasio por sodio, aluminio, cal- • Inanición o anorexia nerviosa.
cio, etc., a razón de 1 mmol de potasio por 1 g • Dietas de “té y tostadas”.
de la sal. Vía oral: 15 a 20 g de Kayexalate • Alcoholismo.
en 50 a 80 ml de agua, con o sin 10 ml de • Geofagia.
sorbitol al 70 %, para evitar la constipación.
Administrar cada 2 h hasta un máximo de 5 b. Pérdidas gastrointestinales:
dosis. • Diarreas o el abuso de laxantes.
Enemas: 45 a 60 g de Kayexalate en 100 ml de • Pérdida de jugo gástrico (vómitos, aspiración continua).
dextrosa al 5 % o sorbitol al 10 %, para retener • Fístulas (biliar, pancreática, yeyunal, ileal, gastrocólica).
durante 30 min, cada 4 o 6 h. • Adenoma velloso.
No utilizar en pacientes en el posoperatorio, • Tumor de células insulares no secretor de insulina.
particularmente en inmunosuprimidos por tras- • Resinas de intercambio catiónico.
plante renal, porque es causa de perforación
intestinal. c. Pérdidas renales:
6. Tratamiento dialítico: la diálisis peritoneal • Administración de diuréticos y diuresis osmótica
constituye un método efectivo para la remo- (manitol y acidosis diabética).
ción del potasio, aunque la hemodiálisis es más • Drogas (salbutamol, anfotericín B, carbenicilina, ticarci-
eficiente. lina y cisplastino).
7. Evitar la recurrencia de la hipercaliemia bus- • Alcalosis metabólica (poca disponibilidad de hidrogenio-
cando el trastorno subyacente, y eliminar cual- nes para el intercambio catiónico).
quier factor reversible que la predisponga. • Síndromes por aumento de corticosteroides (Cushing,
Conn y terapéutica corticosteroidea).
• Enfermedades renales primarias (síndrome de Fanconi,
pielonefritis crónica, acidosis renal tubular).
HIPOCALIEMIA • Acidosis tubular renal, Batter.

d. Otras:
Se define como la concentración sérica menor
• Hipersecreción de insulina. Aumenta la entrada de
de 3,5 mmol/L; se clasifica como moderada la hipo-
potasio a la célula (nutrición parenteral).
caliemia de 3,5 a 3 mmol/L; importante, la hipocalie-
• Leucemia y tratamiento de la anemia megaloblástica. Por
51
la incorporación del potasio a las nuevas células que en reservas totales del organismo, por lo que la
gran cantidad irrumpen en la sangre. hipoca- liemia casi siempre indica una gran
• Parálisis periódica hipocaliémica o tirotóxica. pérdida de di- chas reservas.
• Hipomagnesemia. El potasio administrado se distribuye rápidamen-
te en el espacio extracelular, lo que hace que entren
en acción los mecanismos homeostáticos que prote-
Cuadro clínico gen contra la hipercaliemia. Si se administra el
La hipocaliemia produce alteraciones en los múscu- potasio muy de prisa, esto supera la capacidad de
los lisos y esqueléticos, la conducción cardíaca y la los mecanismos homeostáticos y se produce una hi-
función renal. Desde el punto de vista neuromuscu- percaliemia. Es por ello que siempre que sea posi-
lar, las manifestaciones más llamativas son la pará- ble, la restitución del potasio se hará por la vía oral
lisis fláccida de los músculos esqueléticos y la falta y durante varios días, de preferencia con una solu-
de tono de la musculatura lisa. Esto se traduce por ción que contenga 2 g por cucharada de 15 ml (13,3
debilidad, parálisis e insuficiencia respiratoria, así g de cloruro de potasio en 100 ml de solvente), de
como por la disminución de la motilidad intestinal, la cual se administrarán 6 g diarios. Debe
que puede llegar al íleo paralítico. considerarse el uso de diuréticos ahorradores de
También pueden producirse insulinorresistencia potasio si con estas medidas no se resuelve el
y reducción de la liberación de insulina, que se ex- problema.
presan como una intolerancia a la glucosa. Si la hipocaliemia presenta manifestaciones muscu-
En el sistema cardiovascular aumenta la sensibi- lares o electrocardiográficas, o es menor de 2
lidad a los digitálicos, facilita la aparición de arrit- mmol/L
mias graves y en el 50 % de los casos tienen lugar (aunque sea asintomática), o si es menor de 3
manifestaciones electrocardiográficas, tales como mmol/L y el paciente ingiere digitálicos, la
depresión del segmento ST, disminución de la am- administración de potasio se realizará por vía EV,
plitud e inversión de la onda T, y aparición de una preferiblemente con cloruro de potasio (ámpulas de 10
onda U. Se ha señalado también mayor amplitud de ml con 25,5 mmol de potasio) o con gluconato de
la P y prolongación del intervalo PR. potasio (ámpulas de 20 ml con 25,5 mmol de
A nivel renal es característico un estado poliúrico potasio), en la forma que se señala en el cuadro
por pérdida de la capacidad de concentración de la 3.3; esto se basa en que un individuo normal
orina, que en los primeros momentos no tiene tra- aumenta el potasio en l mmol/L luego de 3 h de una
ducción histológica, o sea, que las alteraciones re- infusión de 0,6 mmol/kg/h.
nales iniciales de la pérdida de potasio son de carácter Como regla general, no deben administrarse más
funcional. Posteriormente, al mantenerse el cuadro, de 100 mmol en 24 h ni suministrar la solución a
aparecen lesiones de vacuolización del citoplasma un ritmo mayor de 40 mmol/h. Tampoco debe
de las células tubulares proximales, que permiten aplicar- se el potasio directamente en vena.
sustentar el diagnóstico de nefropatía caliopénica.
CUADRO 3.3
También se altera la reabsorción del magnesio. TRATAMIENTO DE URGENCIA
La pérdida de potasio produce una alcalosis me- DE LA HIPOCALIEMIA
tabólica por redistribución de los hidrogeniones hacia
las células, para ocupar el lugar del potasio, en vir- KCl EV
tud de la electroneutralidad de los compartimientos. Paciente mmol/kg/h
No diabético
Tratamiento • Función renal normal 0,6
El tratamiento de la hipocaliemia comprende no sólo • Insuficiencia renal 0,3
la reposición de las pérdidas, sino también la elimi- Diabético
nación de la causa que le dio origen. • Función renal normal 0,2
Se ha calculado que en un adulto promedio la • Insuficiente renal 0,1
disminución de 0,3 mmol/L de potasio sérico, se Protocolo:
corresponde con una pérdida de 100 mmol de las 1. Añadir el potasio calculado a una solución salina al 0,9 %.
2. Administrarlo en 1 o 2 h.
3. Monitorizar el ECG.
4. Al finalizar la infusión, chequear nuevamente el valor
plasmático del potasio.
52
4
EQUILIBRIO ACIDOBÁSICO
Antes de emprender el estudio del equilibrio acido- En cambio, si se disuelve otro tipo de ácido
básico y sus alteraciones, es necesario precisar al- como el carbónico (H2C03), éste se ioniza
gunos conceptos que son fundamentales para su débilmente, es decir, permanece casi todo en la
comprensión. solución en forma de ácido o moléculas enteras
(H2C03) y muy poco en
de iones bicarbonato (HCO3 ) e hidrógeno
-
forma
Ácido y base (H ). En resumen, el H
+

Un ácido es una sustancia que puede donar iones 2


C03 en solución libera pocos
hidrógeno (H ), como el ácido clorhídrico (HCI), H , por ello sólo acidifica el medio de manera débil
+ +

que al disolverse se disocia en Cl- e H+. y se le cataloga como un ácido débil (Fig. 4.2).
Una base es una sustancia que puede aceptar io-
nes hidrógeno, como el amoníaco (NH3), que al cap-
tar un H+ se transforma en el radical amonio (NH H2CO3
-
H CO3
4
). H CO3 H2CO3

Son también bases las sustancias que pueden libe- H +

-
rar radicales hidroxilos (OH-), como el hidróxido
de sodio (NaOH), ya que estos captan los H+ y for- 2
CO3 HCO3 + H
H CO H+
2 3

man agua (H20). H2CO3 H2CO3

Ácido fuerte y ácido débil Fig. 4.2. Solución de H


Cuando un ácido se disuelve en un líquido, in- CO3 en agua. El ácido se disocia par-
2

mediatamente se disocia en sus iones constituyen- cialmente en sus iones constituyentes.


tes, aunque la intensidad de esta disociación varía
de un ácido a otro. Constante de disociación
Si a un recipiente que contiene agua se le añade Cuando un ácido se ioniza, sus elementos cons-
una cantidad de HCl, éste se ioniza casi totalmente, tituyentes tienden de nuevo a unirse, como si una
y en la solución se encuentra mucho más en forma fuerza los separara y otra tratara de reunirlos. Por
de iones hidrógeno y cloro que de ácido o moléculas ello, la reacción química de un ácido cualquiera
enteras. O sea, que el HCl en solución libera una (HA) se expresa siempre con flechas en ambos
gran cantidad de H+ y acidifica de manera intensa el sentidos:
medio. Por eso se dice que es un ácido fuerte (Fig. 4.1).
HCl HA H+ + A-

Cuando se trata de un ácido fuerte, como el HCl,


H + Cl- la velocidad con que sus elementos constituyentes
Molécula - Cl
entera
HCl
H+ Cl-
se disocian, es superior a la velocidad con que se
H+
Iones vuelven a reunir, por lo cual en un momento dado
Cl- H
+

de la reacción existirán mucho más moléculas del


áci-
HCl H+ + Cl-
Cl- do disociadas que enteras. Lo contrario ocurre en el
HCl Cl
- +
H
H+
caso de un ácido débil, como el H2CO3.
Cl- H+
A medida que un ácido se va ionizando, dismi-
Fig. 4.1. Solución de HCl en agua. El ácido se disocia casi nuye la velocidad de separación de sus iones. Igual-
totalmente en sus iones constituyentes. mente, en tanto que los iones se reúnen de nuevo

53
para reconstituir el ácido, la velocidad es menor. Lle- también hasta encontrar un nuevo equilibrio como
ga un momento en que las velocidades se igualan y en el caso anterior.
se establece un equilibrio entre la cantidad de ácido Si en vez de añadir nuevos iones hidrógeno,
entero y ácido ionizado. En este instante existe una éstos se sustraen, entonces la reacción se
proporción entre el ácido entero y el ionizado —por desplazará ha- cia la derecha:
ello la diferencia de longitud de las flechas en las
figuras 4.1 y 4.2—, que es siempre una cantidad pro- [HCl] H+ sustraído + [Cl-]
pia y constante para cada sustancia, llamada cons-
tante de disociación, expresada por la letra K, seguida
por la fórmula química del elemento en cuestión en hasta encontrar un nuevo equilibrio.
forma de subíndice, e igual al producto de los iones Es decir, que cuando se añade un elemento la reac-
disociados partido por el ácido entero ción se desplazará hacia el lado opuesto, pero cuan-
do se sustrae, entonces el desplazamiento de la
KHA = H · A reacción es hacia el mismo lado de la sustracción.
HA
El pH del agua
Así, KH2CO3 significa constante de disociación El agua contiene la misma cantidad de H+ que de OH-,
por lo cual es neutra. Además, la mayor parte de
del ácido carbónico.
sus moléculas se encuentran enteras, y a la
Ley de acción de masas temperatura ambiente sólo están disociadas
0,0000001 eq/L
Esta ley establece que la velocidad con que se reali- (Fig. 4.3).
za una reacción química es proporcional a la masa
activa o concentración de las sustancias que reac- H2O
cionan. La concentración de una sustancia se repre- OH-
HOH
senta por medio de corchetes [ ]. Por ello, si en la HOH
H+
reacción en equilibrio
HOH HOH
HOH
[HCI] [H+] + [Cl-] OH-
H+
HOH HOH
HOH
se añade una nueva cantidad de HCl, la reacción se
desplazará hacia la derecha: H+ =OH
H+ =0,0000001 eq/L

HCl añadido Fig. 4.3. Representación química del agua contenida en un re-
cipiente.

La concentración de H + libres o disociados es la


[HCl] [H+] + [Cl-]
que determina la acidez de una solución, por lo cual
hasta encontrar un nuevo equilibrio en que habrá una para expresar la acidez del agua habría que de-
+
libres
mayor cantidad de HCl entero y también de H y Cl , cir que tiene una concentración de H
+ -

aunque guardando la misma proporción entre ácido de 0,0000001 de eq/L, y lo mismo se aplicaría a
entero y disociado que al inicio. cualquier otro líquido. Dado que bastan cantidades
Si lo que se añade es H+, la reacción se despla- + libres para acidificar una solución, elínfimas de H
zará hacia la izquierda: grado de acidez de cualquier líquido tendría que ser
expresado siempre en cifras decimales muy largas.
H añadido
+
Para evitar esto, Sorensen introdujo en 1909 el símbolo
pH. El pH es el logaritmo negativo de la
concentra- ción de hidrogeniones. Como el
[HCl] [H+] + [Cl-] logaritmo de un número dado es el exponente al
que hay que elevar un número base (10) para
obtener dicho número dado, y en este caso el
número dado 0,0000001 es

54
igual a 10-7, el logaritmo de 0,0000001 es -7. Puesto Si se repite el experimento, pero utilizando plas-
que el símbolo pH expresa un logaritmo negativo o ma en lugar de agua en una campana cerrada (para
invertido, el pH del agua será 7. que no se escape el CO2 disuelto) a la cual se
Al ser neutra el agua, todo líquido que contenga conec- tan un manómetro y un potenciómetro,
una mayor concentración de hidrogeniones que ella, éste mar- ca 7,4, que es el pH normal del plasma, y
será un ácido y tendrá un pH inferior a 7. Las bases aquél 3 v % de CO2 (Fig. 4.6), que es la cantidad de
tienen una menor concentración de H+ que el agua y este gas di- suelto en 100 ml de plasma (CO
en plasma veno-
un pH superior a 7. so 1,35 meq/L o 3 v %). 2

Efectos de la adición de un ácido


fuerte al agua y al plasma
Si a un recipiente que contiene 100 ml de agua se le Manómetro

“conecta” un potenciómetro (equipo que determina


CO2 Potenciómetro
3v
el pH), éste marcará un pH 7 que representa una
concentración de H+ libres de 0,0000001 eq/L
(Fig.4.4). Plasma = 100 ml

pH = 7,4

Fig. 4.6. Plasma recogido en una campana. El pH (7,4) y el CO2


[H+] = [OH-]
(3 v %) son normales.
[HOH]
Si se añade la misma cantidad de HC1 que en el
ejemplo de la figura 4.5, el manómetro, que marca-
Agua = 100 ml ba 3 v % de CO2, ahora registra 63, y el potenció-
metro, que en el caso del agua había marcado un
[H+] =0,0000001 descenso del pH desde 7 hasta 2, ahora sólo indica
pH =7
una disminución de 7,4 a 7,1 (Fig. 4.7).
Fig. 4.4. Concentración hidrogeniónica del agua.

Si al recipiente que contiene agua se le añade HCl,


éste se ioniza intensamente por ser un ácido fuerte,
HCl
y al sumarse una gran cantidad de H+ libres al agua,
aumenta la concentración inicial de éstos de 0,0000001 Manómetro
a 0,01 eq/L y disminuye el pH desde 7 hasta 2. En
resumen, el líquido se acidifica intensa y bruscamen- CO2 Potenciómetro
63 v
te (Fig. 4.5).
HCl
Plasma = 100 ml

Cl- Cl- Cl- Fig. 4.7. Efectos de la adición de HCl al plasma. El pH también
Cl- H+ desciende, pero sólo de 7,4 a 7,1 y el CO2 aumenta de 3 a 63 v %.
H+ Cl-
[H+] [OH-] El HCl, al ser añadido al plasma, reacciona con
[HOH] +
H el bicarbonato de sodio (NaCO3H), que
H+ + H normalmente contiene, con el resultado siguiente:
Agua = 100 ml

H = 0,01eq/L HCl + NaCO3H NaCl + H2CO3 H2O + CO2


pH = 2

Fig. 4.5. Efectos de la adición de HCl al agua, ácido fuerte que En esta reacción, cada miliequivalente de
se disocia casi totalmente. El pH disminuye intensamente de 7 a 2.
NaCO3H origina igual cantidad de H2CO3 y cada

55
miliequivalente de H2CO3 que se forma, se transfor- producen ácidos fuertes, como H2SO4 y H3PO4, que
ma en la misma cantidad de CO2. provienen del catabolismo proteico, y ácido láctico
Puesto que la cifra normal de NaCO3H en el plas- y cuerpos cetónicos por oxidación incompleta de
ma es de 27 meq/l o 60 v %, la cantidad de CO2 que los carbohidratos y grasas, respectivamente, todos
se produce en esta reacción es de 60 v, que añadidos los cuales representan la fuente fundamental de la
a los 3 v iniciales, constituyen los 63 v que ahora car- ga hidrogeniónica diaria. Es decir, que el
registra el manómetro. metabolis- mo normal de un individuo es una
Por otra parte, el HCl, ácido muy fuerte que libe- fuente perenne de sustancias ácidas, de las cuales
ra una gran cantidad de H+, ha sido transformado el organismo tie- ne que disponer, o de lo contrario,
en H2CO3, que es un ácido débil que se ioniza poco vivir en una cons- tante acidosis.
y que, por lo tanto, no puede acidificar mucho el medio. La producción diaria de CO2 y su destino final, si
De ahí el escaso descenso del pH de 7,4 a sólo 7,1. no existieran los riñones, sería como se representa
En conclusión, en el plasma existe un mecanismo en la figura 4.8.
de defensa que impide que la adición de un ácido
CO2
fuerte produzca cambios bruscos y sustanciales en
el pH. Lo mismo puede decirse de la adición de una CO2
base fuerte. Este mecanismo de defensa, en parte
representado en el ejemplo anterior, es complejo, y Tejidos
de él forman parte los elementos siguientes: Plasma

1. Buffers, tampones o amortiguadores. - + HCO


CO + H O H CO H+
a) Buffer bicarbonato.
22 2 3 3

• Sistema bicarbonato-ácido carbónico.


Fig. 4.8. Producción constante de CO2 por los tejidos y formación
b) Buffers no bicarbonato. de H +
, que se acumularían en el organismo
CO3 que da lugar a H
• Sistema de los fosfatos. 2
de no ser eliminados por los riñones.
• Sistema de la hemoglobina.
• Sistema de las proteínas. El CO , que fluye constantemente de los tejidos2
2. Difusión celular. al plasma, se combina en éste con H2O y se forma
H2 CO3. Éste, a su vez, se ioniza en H+ y HCO
3
-
. Ade-
3. Sistema respiratorio.
4. Riñones. más, el CO2 disuelto en el plasma, en contacto di-
recto con el aire alveolar, se elimina a través de los
Buffers, tampones o amortiguadores Se pulmones con la respiración. Esta reacción es
les llama así a las sustancias químicas, cuya pre- reversi- ble en condiciones normales, y la cantidad
sencia en una solución impide que la adición de un de H2CO3 está en equilibrio con el CO2 disuelto, y
ácido o una base produzca cambios bruscos en el también con sus elementos ionizados, H+ y HCO -.
pH de ésta. Un tampón puede ser una mezcla de un Además, el 3
ácido débil con su sal alcalina, o una base débil con CO2 disuelto se encuentra en equilibrio con el CO2
su sal ácida. En el organismo humano, los tampones del aire alveolar.
de importancia fisiológica son siempre mezcla de Pero como se ha presupuesto que el individuo no
un ácido débil con su sal alcalina, como es el caso tiene riñones, el flujo constante de CO2 desde los
del ácido carbónico y el bicarbonato de sodio. tejidos hace, en nuestro ejemplo y en virtud de la
ley de acción de masas, que la reacción se desvíe
hacia la derecha, por lo cual habría cada vez más
H2CO3, y, por lo tanto, más H
Buffer bicarbonato +
libres en el plasma,
Sistema bicarbonato-ácido carbónico que junto con los H provenientes del metabolismo
+

El pH de la sangre proteico, producirían una acidosis perenne. Los ri-


El producto final del metabolismo de los lípidos e ñones impiden que esto ocurra, por lo cual
hidratos de carbono es CO2, que los tejidos difun- fácilmente se deduce la función que estos órganos
den de manera constante a la sangre, donde se hidrata desempeñan en la regulación del equilibrio
y se transforma en H2CO3. De la misma manera se acidobásico.
La producción diaria de H+, que como ya se
seña- ló está constituida sobre todo por ácidos
fuertes como

56
el H2SO4, el H3PO4, el ácido láctico y cuerpos cetó- rivada de dicho ácido). Veamos la ya conocida
-
allínicos, es amortiguada en el plasma por el HCO
3 reac- ción:
existente (esto se representa en la figura con la fle-
cha en ángulo recto), y posteriormente eliminada por H2CO3 H + HCO 3
+ -

los riñones. En dicha operación, el riñón resintetiza


el HCO3 que se perdió en la amortiguación de la
-

carga diaria de H+, y lo incorpora a la sangre en for- Ya se explicó que cuando esta reacción está en
ma de NaCO3H (Fig. 4.9). equilibrio, existe una proporción fija y constante
entre el ácido entero y sus elementos ionizados, lla-
mada KH2CO3 o constante de disociación del ácido
car-
CO2
H3PO4
H+ bónico, y que, por lo tanto, la reacción anterior
CO2 H2SO4 puede ser expresada del modo siguiente:
Ácido láctico
Cuerpos cetónicos
Tejidos
3
H+ . HCO -
Plasma KH2co3 =
H2CO3
CO + H O + + HCO-
2 2
H2CO3 H 3
o para simplificar y expresar los factores en forma
-HCO + NaCO
de sus concentraciones:
3
+ Na 3
H

[H+] . [HCO 3-]


Fig. 4.9. Formación de NaCO3H por los riñones, que amortigua la K=
[H2CO3]
producción ácida diaria e impide la acumulación del H+ en el or-
ganismo.
y despejando [H+], que como se sabe significa con-
El NaCO3H es una sal fuerte que se ioniza casi centración de hidrogeniones, se tiene que:
-
y Na+ y que está en equili-completamente
3
en HCO
brio con sus elementos disociados.
Si se observa en la figura 4.9, se ve que la pro- [H+] = K . [H2CO3]
ducción renal de NaCO3H ha introducido en el plas- [HCO3
-
(encerrados en el3 rectángulo dema nuevos HCO -
]

líneas interrumpidas junto con los HCO3 - que pro- a lo cual se le llama ecuación de Henderson. Susti-
tuyendo en la ecuación anterior por los números re-
vienen de la ionización del H2CO3); es decir, que se cíprocos, tenemos que:
ha creado lo que se conoce como ion común, pues
efectivamente, el HCO3 CO3
2
-
es común tanto al H 1 1 . 1
[H+] K [H C=O]
como al NaCO3H. El organismo es capaz de identi-
ficar el HCO3 , pero no su origen; por lo tanto, la
-

2 3
-
adición renal de estos nuevos HCO3 y la ley de ac- [HC03 ]
-

ción de masas, hacen que la reacción, que en ausen-


cia de riñones se desplazaba hacia la derecha, y de acuerdo con la regla
liberaba muchos H+ y acidificaba el medio, se des-
place ahora hacia la izquierda y disminuya así, como 1 b
=
es lógico, el número de H libres.
+
a a
En condiciones de normalidad, esta compleja reac- b
ción, en la cual intervienen el H2CO3 y el NaCO3H,
está en equilibrio, y de ella fundamentalmente de- 1
= 1. [HCO3]
2
CO3
pende el estado acidobásico normal y el pH de la [H+] K [H -
]
sangre. Como el H2C03 es el ácido que con mayor
abundancia se produce en el organismo, es lógico Utilizamos ahora el logaritmo de cada elemento,
que el pH de los líquidos orgánicos esté de manera recordando que
directa relacionado con él y con el NaCO3H (sal de-
log (a . b) = log a + log b.

57
log 1 ] 1 + log [HC
-
pH= 6,1 + 1,3 = 7,4
3
log
=
[H+] K [H CO ]
2 3 En conclusión, el pH de la sangre depende de
por definición, pH es el logaritmo negativo de la una constante K y de la relación entre el
concentración de hidrogeniones, o también el loga- bicarbonato y el ácido carbónico, relación o
ritmo del número recíproco de la concentración de proporción que, como se acaba de demostrar, es de
hidrogeniones, por lo cual: 20:1. Siendo K una ci- fra constante, se puede
inferir que el pH depende directamente de la
relación bicarbonato-ácido car-
log 1 pH bónico, o sea, del tampón o amortiguador bi-
= carbonato-ácido carbónico. En la figura 4.10 se
[H ]
+

representa el funcionamiento de este tampón cuan-


y por el mismo motivo, do se produce una sobrecarga de ácidos (HA).

log 1 p= CO2 CO2


H+
K. CO2
K
Tejidos
Sustituyendo en la ecuación, resulta que:
Plasma A-
H+

pH
pK= + log [HCO3-]
[H2CO3] CO + H O H + HCO
+ -
2 2 H2CO3 3

a lo que se llama ecuación de Henderson-Hassel- HCO3- + Na+ NaCO H


3

balch.
Debe recordarse que el NaCO3H se ioniza casi Fig. 4.10. Funcionamiento del sistema amortiguador bicarbona-
-
y Na+, y que el H to-ácido carbónico ante una sobrecarga de H+. La reacción se
totalmente en HCO3 des-
2
CO3 sólo lo vía hacia la izquierda, con gran producción de CO y consumo de
hace débilmente en HCO3
-
e H+. O sea, que casi todo 2
HCO3-.
-
H, por lo
del plasma proviene del NaCO3
cual es lógico considerar que en forma aproximada, El ácido fuerte (HA), que hubiera liberado una
el HCO3 del plasma es igual al NaCO 3H. Así, si en
- +
, es neutralizado por el sistema
la fórmula anterior: gran cantidad de H
tampón, puesto que los nuevos H+ forman un ion
común con los del sistema, de manera que la reac-
pH = pK + log [NaCO3H] ción se desplaza hacia la izquierda, con lo cual se
[H2CO3] consume NaCO3H y se produce mayor cantidad
de H2CO3 (ácido débil), que rápidamente se desdo-
se sustituyen por los valores normales en sangre bla en H2O y CO2, y este último se elimina por los
venosa:
pulmones. Es decir, que el organismo ha cambiado
un ácido fuerte (HA) por uno débil (H2CO3) a ex-
pK = 6,1
pensas del bicarbonato, como se simplifica en la re-
NaCO3H = 27 meq/L acción siguiente:
H2CO3 = 1,35 meq/L

se tendrá que: HA + NaCO3H NaA (sal neutra) + H2CO3 H2O


pH = 6,1 + log 27 + CO2
1,35
En caso de que se produzca una entrada exagera-
da de bases (HOB) en el organismo, la reacción
que
tiene lugar es la siguiente:
log 27 log 20
1,3= =
1,35 OHB + H2CO3 CO3HB (bicarbonato) + H2O
luego:

58
Por medio de la reacción se cambia una base fuer-
Sangre arterial
te (HOB), que hubiera alcalinizado al medio in-
tensamente, por bicarbonato, que es uno de los Sangre venosa
constituyentes del sistema.
Cl
-
Buffers no bicarbonato -
HHb HCO3 HbO2
Sistema de los fosfatos
Este sistema opera fundamentalmente en los riño-
nes, por lo cual se dejará su explicación para cuan- Hb-
-
Hb-
HCO3
do se aborde la intervención renal en la regulación H+
del ion hidrógeno. Adelantamos que su ácido débil
lo constituye el radical H2PO 4 y su base, el radi-
- 2
CO3H

cal HPO4
2- H2O+CO3

Sistema de la hemoglobina Plasma


La hemoglobina y la oxihemoglobina representan Tejidos
el 75 % de los buffers no bicarbonato de la sangre y O2
el 35 % del efecto buffer total del organismo. Al
sistema bicarbonato-ácido carbónico correspon-
de el 53 % de esta acción buffer total.
La oxihemoglobina (HbO-
2
) cede O2 a los tejidos Fig. 4.11. Representación esquemática del sistema amortiguador
de la hemoglobina. El ácido débil de este sistema lo constituye
y éstos a su vez difunden CO2 al plasma, donde se la HHb y la base conjugada la Hb-.
hidrata y se forma H2CO3. Este ácido penetra en el
hematíe, donde la enzima anhidrasa carbónica lo
desdobla en HCO- e H+. El H+ se une a la hemoglo-
3
bina reducida (Hb-) para constituir una forma ácida
de ella (HHb), mientras que el HCO- CO2
3
pasa al plas-
Cl - HCO3 -

ma (por ello la cifra de bicarbonato plasmático ve- Plasma


noso es ligeramente mayor que la arterial) y se Eritrocito CO 2
intercambia con Cl-. En esto radica la acción tam- Cl- H2 O
pón de la hemoglobina. La HHb llega al pulmón, don-
de pierde su H+, gana O -
, 2 +
+ HCO-
HHb + O2 H 3 H2CO3
que es como de nuevo llega a los tejidos para repetir
el ciclo (Fig. 4.11). Esto último pudiera hacer pen- HbO- 2

sar al lector que el pulmón elimina iones hidrógeno,


pero tal cosa no ocurre. El H+ liberado por la HHb Fig. 4.12. Representación de la vía de eliminación del H+ que
den- queda libre en el interior del eritrocito al oxigenarse la HHb.

tro del eritrocito reacciona con el


-
y forma HCO ,
HCO 3 2 3
el que se disocia en H2O y CO2; este último pasa al buffers, pues a diferencia de éstos, no se consumen
plasma y se elimina por los pulmones (Fig. 4.12). al reaccionar, sino sólo cambian de forma.
Desde el punto de vista práctico, es más útil con-
Sistema de las proteínas siderar a los buffers no bicarbonato en conjunto y
Las proteínas son sustancias anfóteras, es decir, que representarlos por la reacción siguiente:
se ionizan según las circunstancias; en unos casos
liberan H+ y en otros radicales 0H+, que son HBuf H+ + Buf -
captadores de hidrogeniones. Cuando hay una inva- donde:
sión ácida, se ionizan como álcalis y liberan 0H+, y
cuando la sobrecarga es de bases, se ionizan como
HBuf = ácidos débiles (H2PO4 , HHb, Prot )
- -

ácidos y liberan H+. Constituyen el 7 % del poder Buf = bases (HPO 4 , Hb , Prot ) de los pares
- 2- - -

amortiguador total de la sangre y no son realmente amortiguadores o tampones.

59
Reacción de interacción Exceso de bases
Para lograr la mejor comprensión de los dos siste- Se le llama exceso de bases o base exceso (BE) a
mas buffers (bicarbonato y no bicarbonato), se ex- los cambios que experimenta la base buffer en sus
plicaron como elementos que funcionan paralela e valo- res normales. Se obtiene restando la cifra de
independientemente, pero en realidad esto no puede base buffer normal de la base buffer del
esperarse que ocurra en el medio interno, y de la paciente, es decir:
misma manera que el H2CO3 se interrelaciona y está
-
, que es la base del siste-en
3
equilibrio con el HCO BE = BB del paciente - BB normal
ma bicarbonato-ácido carbónico, reacciona también
con los Buf -, o sea, con las bases del sistema buffer Cuando la BB que tenga el paciente sea menor
-
resintetizado porno bicarbonato. 3A su vez, el HCO que las cifras normales, el resultado será una BE
los riñones se incorpora y equilibra con el sistema negativa, y viceversa, cuando la BB del enfermo
bicarbonato-ácido carbónico, pero además reaccio- sea superior a la normal, la BE será positiva. Así, si
na con los HBuf, que representan al ácido débil en un paciente tiene una ganancia de 10 meq/L de H+
el sistema de los buffers no bicarbonato. y, por lo tanto, se consumen 10 meq/L de bases en
De lo anteriormente explicado, resulta la reacción el tamponamiento del ácido, la BB de aquél será de
siguiente: 48
- 10 = 38 meq/L; o sea, que su situación sería:
H2CO3 + Buf
-
HBuf + HCO 3- BB del paciente = 38 meq/L
BB normal = 48 meq/L
que se conoce como reacción de interacción porque BE del paciente = -10 meq/L
de izquierda a derecha representa la interacción del
ácido débil del sistema bicarbonato y la base del no Pero si se produce una ganancia de 10 meq/L
bicarbonato, mientras que de derecha a izquierda de OH+ y, por lo tanto, un aumento de 10 meq/L de
expresa la reacción entre la base del sistema bases, la BB del paciente será de 48 + 10 = 58
bicarbonato y el ácido débil del no bicarbonato. meq/L; es decir, que su situación sería:
La reacción de interacción tiene importancia cuan-
do la sobrecarga o la pérdida de ácidos o bases en el BB del paciente = 58 meq/L
organismo es de los propios elementos del sistema BB normal = 48 meq/L
bicarbonato-ácido carbónico, es decir, cuando hay BE del paciente = +10 meq/L
un exceso o un déficit de H2CO3 o de NaCO3H.
Base buffer Aunque en el primer caso se produce en realidad
Se le llama base buffer (BB) a la suma de todas las un déficit de bases de 10 meq/L, y en el segundo un
bases que hay en un litro de sangre total, es decir: exceso de bases de 10 meq/L, se acostumbra expre-
sar estas situaciones en términos de “exceso positi-
vo” o “exceso negativo”, anteponiendo a los
HCO3 + Buf (HPO4 , Hb , Prot ).
- - 2- - -
resultados el signo correspondiente (+ o -), según
Su cifra normal guarda relación directa con la de sea el caso. Este concepto del exceso de bases y los
hemoglobina, toda vez que esta es el buffer no bi- resultados de su determinación en los pacientes es
carbonato más abundante. Así: de suma utilidad en la interpretación de las altera-
ciones del equilibrio acidobásico.
Hemoglobina Base buffer Difusión celular
% (meq/L)
Toda sobrecarga ácida se acompaña de un
8 45 tampona- miento de los hidrogeniones en el
13 47 espacio extrace- lular. Pero además de este
15 48
mecanismo de defensa, existe otro llamado
20 50
difusión celular, que consiste en un intercambio
iónico entre los espacios intracelu- lar y
extracelular, mediante el cual los H+ en exceso

60
en este último pasan activamente al interior de las El mecanismo respiratorio compensador de la
células, al tiempo que un ion con la misma carga, acidosis aparece rápidamente, en cuestión de minu-
por lo general sodio o potasio, sale de ellas. La pro- tos, aunque nunca llega a compensar por completo
porción habitual de Na+ y K+ en este intercambio es el cuadro. Esto se debe a que el CO
de dos partes del primero por una del segundo. Aun- 2
elevado estimu-
que en menor grado, también los H+ penetran en las la la respiración, con lo cual se elimina aquél, a la
células acompañados de iones con carga contraria, vez que disminuye la concentración de H+. Este
como el Cl-. acer- camiento a la normalidad acidobásica
Al mecanismo de la difusión celular, que pode- suprime los factores que de forma inicial
mos considerar como un “tamponamiento biológi- produjeron la hiper- ventilación, con lo cual ésta
co”, es probable que le siga, dentro de las células, decrece y de nuevo vuel- ve a acumularse el
un verdadero tamponamiento químico. A diferencia CO2 y a descender el pH. Naturalmente, se
de los sistemas buffers, que actúan de manera ins- alcanzará un equilibrio en el cual el pH estará
tantánea, éste tarda entre 2 y 4 h en producir sus siempre por debajo de lo normal.
efectos, mediante los cuales el medio interno dispone Parece que en los estados de alcalosis, la situa-
de aproximadamente la mitad de los H+ en exceso. ción compensadora por un mecanismo contrario al
La difusión celular, con sus dos posibilidades de que se acaban de describir, si bien existe, no tiene
intercambio, se esquematiza en la figura 4.13. la magnitud ni la misma efectividad que en la
acidosis. Riñones
E. intracelular E. extracelular Al igual que el sistema respiratorio, la participación
de los riñones en la defensa del medio interno con-
+ tra una sobrecarga ácida es de tipo compensadora.
Sin embargo, esta compensación renal que está
H
ínti-
+
H mamente ligada a la reabsorción del bicarbonato, es
Na +
mucho más efectiva que la respiratoria, aunque ne-
cesita alrededor de 5 días para ejercer al máximo su
K+
efecto.
Cl- Se sabe que un adulto promedio produce en sus
procesos metabólicos alrededor de 60 meq de H+
dia- rios, cuya fuente es de manera
fundamental el
Fig. 4.13. Representación de la difusión celular. Los H+ pene- catabolismo proteico y la oxidación metabólica in-
tran en las células intercambiándose por Na+ o K+; también lo
hacen acompañados de Cl-.
completa de los hidratos de carbono y las grasas.
Estos hidrogeniones o protones son amortiguados
por el sistema buffer de los líquidos orgánicos y,
Sistema respiratorio
como ya se ha explicado, no modifican el pH de és-
Como se demostró en la figura 4.10, un exceso de tos en virtud precisamente de dicho tamponamiento.
H+ en el plasma ocasiona una desviación de la reac- Una vez llegados los H+ al riñón, éste los elimina
ción hacia la izquierda con formación de abun- utilizando diferentes mecanismos, los cuales son
dante C O 2, y como es de suponer, a mayor pa- trimonio del aparato tubular y actúan de forma
producción de CO2, mayor eliminación de éste por fun- damental en el túbulo contorneado proximal y
la respiración, independiente del nivel de ventila- en el sistema distal colector. Estos
ción. Pero no es en este hecho donde verdaderamente mecanismos son esencialmente dos: secreción y
radica la función compensadora del sistema respira- excreción tubular.
torio en los estados de acidosis, sino en la estimula- La secreción es el mecanismo por medio del
ción que sobre el centro respiratorio realiza, tanto el cual el riñón elimina un H+ y forma un HCO - en el
aumento del CO2 como la disminución del pH. Esta túbulo 3
estimulación produce una hiperventilación, con la
contorneado proximal. Equivale a la reabsorción
consiguiente eliminación de grandes cantidades
del bicarbonato.
de CO2, ya que por cada molécula de CO2 que es
La excreción de H+ puede ser de dos tipos:
eliminada, el plasma amortigua un H+. excre- ción libre y excreción en forma de acidez
titulable y de ion amonio, lo cual ocurre en el
túbulo contor- neado distal.

61
Reabsorción del bicarbonato Como puede observarse, el HCO3 - que llega a la
En un adulto promedio, diariamente se filtran y se sangre peritubular no es el mismo que se filtró,
-
. Lareabsorben alrededor de 5 000 meq de HCO 3 aun- que el resultado sea igual. Estudios con
-
se realiza en virtud de
3
un in-reabsorción de HCO isótopos radiactivos han demostrado esto.
tercambio iónico, con gasto energético, del cual de-
pende la reabsorción activa del catión Na. La Excreción libre de hidrogeniones
reabsorción activa de Na+ crea un gradiente electro- La cantidad ínfima de H+ libres que aparece en la
químico (con negatividad en la luz tubular) y para orina es responsable del pH en ella. Si el riñón
mantener la electroneutralidad debe salir un H+ de la sola- mente pudiera valerse de este mecanismo
célula al túbulo, o de lo contrario, reabsorberse un para eli- minar los iones hidrógeno, el organismo
anión difusible: por ejemplo, el Cl-. estaría en balance positivo de éstos y desarrollaría
-
es un anión
3
para el cual la membranaEl HCO una acido- sis progresiva, hasta llegar a la muerte.
celular es impermeable. El mecanismo por el cual El pH míni- mo de la orina es de 4,5; cifras
se produce su reabsorción se representa en la figu- inferiores ocasionarían la destrucción de las células
ra 4.14. El H+ intracelular que surge de la hidrata- tubulares.
ción del CO2 en presencia de la anhidrasa carbónica
(AC), se desplaza hacia la luz tubular intercambián- Acidez titulable o acidificación de tampones
dose con Na+, el cual es reabsorbido. En la luz Mediante este mecanismo el riñón elimina también
tubular el H+ se combina con el HCO3- filtrado para el exceso de ácidos de la economía, y tiene lugar en
formar H2CO3, que se disocia en CO2 y H2O en vir- el túbulo contorneado distal y en el tubo colector.
tud de la acción de la AC, presente en la región El transporte de H+ para la acidificación de tam-
luminal en los ribetes en cepillo de los túbulos. pones se realiza en intercambio con el Na+ de la luz
tubular, donde el H+ reacciona con el fosfato
Luz tubular Célula tubular proximal E. intersticial disódi- co (Na2PO4H), el cual se transforma en
Na+ Na+
fosfato mo- nosódico (NaPO4H2). Esta reacción
Cl- Cl- da lugar a la liberación de Na+ que pasa a la
célula y de ésta, a través del espacio intersticial, a
AC la sangre (Fig. 4.15).
CO2 + H2O Luz tubular Célula tubular distal E. intersticial

H2CO3 AC

CO2 + H2O

HCO3 + H H + HCO3 HCO


- + + - -
3 H2CO3

H2CO3 AC +
H + HCO3
+ -
Na2PO4H + H HCO3

H2 O CO2 CO2 NaPO4H2 + Na Na+ Na+

Fig. 4.15. Mecanismo de la acidez titulable. El H+ eliminado


Ribete en cepillo
se combina con el Na2PO+H y lo transforma en NaPO4H2, con
Fig. 4.14. Representación de la reabsorción del HCO- en el lo que se ahorra un Na+.
3
túbulo renal.
Excreción de amonio
El HCO3 que queda libre en la reacción in-
- El cuarto mecanismo mediante el cual el riñón eli-
mina el exceso de ácidos (H+) es la excreción del
tracelular con la presencia de AC, se desplaza hacia +
).ion amonio (NH4
el espacio intersticial y los capilares. Por último, en El amoníaco (NH3) se forma a partir del nitróge-
la reacción que ocurre en la luz tubular, el CO2 allí
no amídico y tal vez del nitrógeno amínico de los
formado difunde hacia la célula y garantiza así una aminoácidos (comprobado en el perro). Es un gas
concentración celular suficiente de este gas para con- soluble en los lípidos y difunde a través de la mem-
tinuar el ahorro de bases.

62
brana celular. Una vez producido en las células Luz tubular Célula tubular distal E. intersticial

tubulares, difunde hacia el líquido ácido de la luz Na +


Na+
tubular y se encuentra con el hidrogenión que salió Cl -
Cl-
de la célula tubular distal por el mecanismo de in- AC
tercambio catiónico, favorecido por la aldosterona CO + H O
en competencia con el potasio. Se convierte enton- 2 2

ces en NH4 (Fig.4.16), poco difusible, el cual que-


+
H2CO3
da fijado en el líquido tubular y posteriormente
eliminado por la orina. -
+ + + HCO -
NH3 + H H 3
HCO3
En condiciones fisiológicas, la cantidad de amonio
NH4
excretada por el riñón es inversamente proporcional
al pH urinario. +

NH4Cl

Fig. 4.16. Producción de NH3 y eliminación de NH4Cl.

63
5
ALTERACIONES DEL
EQUILIBRIO
ACIDOBÁSICO
Clasificación Aceptando el punto de vista de que un disturbio
simple tiene sólo un factor etiológico primario, se
Las alteraciones del equilibrio acidobásico se han
pueden reconocer cuatro disturbios simples del
clasificado de diversas maneras y los datos corres-
equi- librio acidobásico: dos alteraciones
pondientes a la clínica y al laboratorio se han es-
respiratorias (aci- dosis y alcalosis respiratorias) y
quematizado en múltiples formas gráficas.
dos alteraciones metabólicas (acidosis y alcalosis
Existe un acuerdo general de que estos trastornos metabólicas).
clínicos deben dividirse en dos grandes categorías La acidosis es el estado patológico que tiende a
patógenas: alteraciones respiratorias, que se rela- producir disminución del pH de la sangre, lo cual
cionan con anomalías del sistema respiratorio en la ocurre si no aparecen cambios secundarios o com-
eliminación del bióxido de carbono (CO2) por los
pensadores. Cuando la tendencia al descenso del
pulmones, y alteraciones metabólicas, que se rela- pH de la sangre se debe a la gananacia primaria de
cionan con anomalías del sistema metabólico en la un ácido fuerte o a la pérdida primaria de una base
producción, ingestión y excreción de los iones de del líquido extracelular, estamos en presencia de
hidrógeno (H+). una acidosis metabólica. Si por el contrario, la
Las alteraciones de uno de estos sistemas —res- tenden- cia a la disminución del pH de la sangre
piratorio o metabólico— suelen desencadenar una se debe a una reducción primaria de la ventilación
respuesta compensadora en el otro, la que tiende a alveolar en relación con la producción de CO , se
mitigar la desviación de la tasa de H+ en los líquidos está ante una 2
extracelulares. Atendiendo a esto último, se pueden acidosis respiratoria.
clasificar las alteraciones clínicas del equilibrio aci- La alcalosis es el estado patológico que tiende a
dobásico en primarias y secundarias o compensa- producir aumento del pH de la sangre, lo cual
doras. Por ejemplo, un paciente con una diabetes ocurre si no aparecen cambios secundarios o
mellitus descompensada, con gran producción de H+ compensado- res. Si la tendencia al incremento del
a partir de su metabolismo alterado, desencadenará pH de la san- gre se debe a la gananacia primaria
un mecanismo de compensación respiratoria, con de una base o a la pérdida de un ácido del líquido
polipnea y aumento de la eliminación de CO2. En extracelular, esta- mos en presencia de una
alcalosis metabólica. Cuan- do se debe a un
aumento primario en la ventilación alveolar en
relación con la producción de CO2, en-
este caso, la gran producción de hidrogeniones re- tonces existe una alcalosis respiratoria.
presenta el disturbio primario, la polipnea con eli- El estudio de las alteraciones del equilibrio aci-
minación de CO2, el mecanismo compensador o dobásico en el momento actual, se basa fundamen-
disturbio secundario. talmente en el análisis de la hemogasometría
Cuando hay más de un trastorno acidobásico pri- arterial o del capilar arterializado y del ionograma,
mario en un mismo paciente, la anomalía se clasifi- por lo que se hará una somera revisión del
ca de mixta; mientras que si existe una sola alteración “lenguaje de laboratorio” que se utiliza en relación
primaria se denomina simple. La base más racional con estos tras- tornos.
para decidir si un disturbio es simple o mixto, es el Es necesario enfatizar que la hemogasometría
venosa no resulta de utilidad en el análisis del esta-
número de factores causales presentes en ese mo-
do acidobásico del paciente, por lo que no debe em-
mento y el estado del factor compensador, como se
plearse con este fin.
verá más adelante.

64
VALORES HEMOGASOMÉTRICOS NORMALES La cantidad de CO2 que se une a la Hb resulta
ínfima (compuestos carbamílicos de la Hb), por lo
Mediciones Unidades Arterial Venoso
que en la hemogasometría habitual no se informa.
pH 7,35 - 7,45 7,28 - 7,35 El que se disuelve en el plasma es expresado como
-
lo realiza
PCO2 mmHg 35 - 45 45 - 53 PaCO2 y el que se transforma en CO3H
TCO2 mmol/L 22 - 29 24 - 31 mediante la reacción de hidratación del CO2,
SB meq/L 21 - 25 21 - 25
EB meq/L ± 2,5 ± 2,5 catalizada por la enzima AC:
PO2 mmHg 95 - 100 28 - 40 AC
SaO2 % 97 - 100 62 - 84 -
+ H+
+
CO
H O <—> H CO <—> HCO
2 2 2 3 3

pH La suma de estas 3 formas de transporte del CO2


Se define como el logaritmo negativo de la concen- es la que los gasómetros informan como TCO2.
tración de hidrogeniones [H+], pero para nuestros Los valores normales de la PaCO2 alcanzan de
objetivos debemos conceptuarlo como la concentra-
35 a 45 mmHg (Torr); se produce acidosis al
ción de H+ que existe en una solución y que deter-
elevarse sus valores por encima de 45 mmHg
mina su nivel de acidez o alcalinidad. Sus valores
porque aumen- ta la formación de H2CO3. Como el
normales oscilan entre 7,35 y 7,45; se conceptúa
como acidosis todo valor inferior a 7,35 y como al- paso del CO2 de la sangre al alvéolo ocurre también
calosis, los superiores a 7,45 por difusión sim- ple, la PaCO2 se toma como
Resulta importante conocer los llamados límites expresión de la ventila- ción alveolar.
extremos de pH, pues son los valores incompatibles
con la vida; éstos se encuentran en cifras inferiores a Bases buffer
6,80 y superiores a 7,80. La excepción a esta regla Las bases buffer (BB) del organismo se pueden cla-
está dada por la acidosis de la cetoacidosis diabética. sificar de la manera siguiente:
También se conocen los límites permisibles de pH,
que son los valores superiores a 7,30 e inferiores Bicarbonato (53 %)
a 7,50, en los que casi nunca se necesitará de su correc- BB
ción en caso de constituir trastornos agudos. No bicarbonato (47 %)
• Sistema de la Hb (35 %)
• Sistema de las proteínas (7 %)
VALORES HEMOGASOMÉTRICOS “PERMISIBLES” • Sistema de los fosfatos (5 %)
Mediciones Unidades Arterial Venoso
Esto explica por qué el sistema buffer bicarbona-
pH 7,30 - 7,50 7,25 - 7,40 to es el más importante, y la gasometría lo informa
PCO2 mmHg 30 - 50 40 - 60
como standard bicarbonate (SB), con valores nor-
TCO2 mmol/L 22 - 29 24 - 31
SB meq/L 21 - 27 21 - 27 males entre 21 y 25 meq/L (mmol/L). Existen evi-
EB meq/L ±5 ±5 dencias clínicas de que aunque el sistema
PO2 mmHg 70 - 100 29 - 40 bicarbonato es el más importante de los sistemas
SaO2 % 90 - 100 35 - 60
buffer, las alte- raciones del no bicarbonato
repercuten en el indivi- duo (tendencia a la
PaCO2
acidosis de anémicos y desnutridos), por lo que
La presión parcial (P) es la presión que ejerce un
Astrup midió las bases bu- ffer reales de la sangre
gas que forma parte de una mezcla de gases, por lo
que la PaCO2 es la presión parcial arterial del bióxi- (BBR) y las comparó con las que normalmente
debían estar presentes (BBN). A este producto de
do de carbono. El CO2 se produce en el ámbito celu-
la diferencia entre BBR y BBN le llamó exceso de
lar como resultado del metabolismo de los principios bases (EB). Su valor normal es cero, con un margen
inmediatos en el ciclo de Krebs. Este gas pasa de la
de variación de ± 2,5 meq/L (mmol/L). EB = BBR -
célula a la sangre por difusión simple y es transporta-
BBN
do en ella en tres formas: disuelto en el plasma (30 %),
unido a la hemoglobina (Hb) (5 %) y en forma de Obviamente, un EB positivo nos habla de un au-
3
) (65 %). mento de las BB del organismo y, por tanto,
bicarbonato (HCO- sugiere

65
la existencia de una alcalosis, mientras que un EB saturados al 100 % sólo tiene 6,95 vol % de O2 en
negativo sugiere la de una acidosis. la sangre (cantidad insuficiente de reserva de O2
para la célula), y un enfermo con 15 g % de Hb
Oxigenación saturados al 80 % posee 16 vol % de O2 en la
En la atmósfera existe un 21 % de oxígeno y la PO2 sangre (cantidad suficiente de reserva de O2 para
atmosférica es de alrededor de 150 mmHg. A nivel la célula). Es por ello que cuando se analice la
alveolar ésta desciende y alcanza valores de 104 mmHg. SaO2, se debe también analizar las cifras de
El oxígeno pasa entonces a la sangre y se transporta
de dos formas: disuelto en el plasma (PaO2) (3 %) y hemoglobina y de hematócrito para llegar a
conclusiones correctas. Sus valores normales son
unido a la hemoglobina (SaO2) (97 %). de 97 a 100 %
Cuando se respira aire atmosférico, los valores
normales de la PaO2 se encuentran entre 95 y Diagnósticos gasométricos
100 mmHg; para considerar que existe hipoxemia, En toda hemogasometría arterial o capilar se deben
sus valores deben encontrarse por debajo de 80 mmHg, realizar tres diagnósticos: 1. Estado del equilibrio
ya que por encima de esta cifra no provocan altera- acidobásico; 2. Grado de compensación, y 3. Esta-
ciones fisiológicas por falta de oxígeno. do del factor compensador.
Resulta importante recordar que el pulmón enve-
jece igual que el resto del organismo, lo que altera Diagnóstico del estado del equilibrio acidobásico
la difusión de los gases. En pacientes entre 60 y 90 (EAB)
años de edad que respiren aire atmosférico, la PaO2
Para ello se procede al análisis de los elementos
“aceptable” puede calcularse mediante la fórmula: pH, PaCO2 (elemento respiratorio del EAB), SB y
EB
PaO2 = 140 - edad en años (elementos metabólicos del EAB), y se determinan
por sus valores las alteraciones que se presentan.
Por ejemplo, un paciente de 75 años tendrá una Posteriormente se busca el elemento cuya
PaO2 “aceptable” de 65 mmHg (140 - 75 = 65), y no alteración coincida con la del pH, de la forma
por este valor necesita de la terapéutica con oxíge- siguiente:
no. En mayores de 90 años, la PaO2 normal se con-
sidera que es de 50 mmHg y a cualquier edad, una • pH 7,25 Acidosis (pH menor de 7,35)
PaO2 menor de 40 mmHg se considera una hipoxe- • PaCO2 25 mmHg Alcalosis (PaCO2 menor de
35 mm Hg)
mia grave.
• EB -15 meq/L Acidosis (EB negativo)
Debe recordarse que cuando se analiza el oxíge-
no que utiliza la célula, lo evaluamos con la PaO2, y El trastorno coincidente con la acidosis del pH
que al recibir el enfermo tratamiento por medio de es el del EB, por lo que se concluye este análisis
la oxigenación hiperbárica, lo que se está haciendo como una acidosis metabólica. En realidad, lo que
es incrementar la cantidad de oxígeno disuelto en el se está afirmando es que el trastorno primario es de
plasma y, por lo tanto, elevando la PaO2. índole metabólica y que este ha provocado la
acidosis que demuestra el pH. Si por el contrario se
SaO2 encuentra:
Un gramo de hemoglobina es capaz de transpor-
tar entre 1,34 y 1,39 volúmenes por ciento de oxígeno • pH 7,25 Acidosis (pH menor de 7,35)
(vol %), por lo que un individuo normal con 15 g % • PaCO2 55 mmHg Acidosis (PaCO2 mayor de
de Hb posee alrededor de 20 vol de O2 por cada 100 45 mm Hg)
• EB -15 meq/L Acidosis (EB negativo)
cc de sangre (15 x 1,39). La saturación de oxíge-
no de la Hb (SaO2) no es más que la cantidad de he-
se observa que tanto el factor respiratorio como el
moglobina que se encuentra en realidad combinada metabólico coinciden con el del pH, por lo que se
con oxígeno, comparada con la que idealmente de- le clasifica como acidosis respiratoria y metabólica,
biera estar. Los porcentajes son números relativos y doble o mixta.
no absolutos, por lo que un paciente con 5 g % de Hb
Diagnóstico del grado de compensación
Concepto de compensación. Se le llama compensa-
ción al proceso fisiológico que ocurre como
respuesta
66
a un trastorno primario del EAB, cuyo fin es retor- como acidosis metabólica parcialmente compen-
nar el pH de la sangre hacia la normalidad. Tiene sada.
varias características, como:
• pH 7,35 Normal
1. Es un proceso secundario, puesto en marcha • PaCO2 20 mmHg Alcalosis
por la anormalidad primaria. • EB -10 meq/L Acidosis
2. Es mediado por uno o varios órganos específi-
cos, sobre todo los riñones o los pulmones. En este ejemplo se observa que el pH es normal
3. Afecta al componente del EAB no primaria- (cercano a la acidosis) y que existen alteraciones
mente alterado por la anormalidad inicial. contrapuestas en los elementos respiratorio y meta-
bólico. Se concluye como acidosis metabólica com-
Así, cuando el trastorno primario es de tipo respi- pletamente compensada.
ratorio, la compensación será metabólica, y vicever- Si por el contrario, se obtiene el siguiente resultado:
sa, cuando la anormalidad primaria es metabólica,
la compensación será de tipo respiratorio. • pH 7,45 Normal
Grados de compensación.Los grados de compen- • PaCO
2
20 mmHg Alcalosis
sación se han definido de la forma siguiente: • EB -10 meq/L Acidosis
Descompensado. Cuando ningún efecto compen-
sador está presente. Se reconoce porque el factor lo concluimos como alcalosis respiratoria comple-
compensador se mantiene en valores normales. tamente compensada (pH más cercano a la alcalosis).
Parcialmente compensado. Cuando existe algún Hay que recordar:
efecto compensador, pero el pH no ha retornado
a lo normal. 1. Los trastornos mixtos siempre están descom-
Completamente compensado. Cuando el efecto pensados.
compensador está presente y el pH ha retornado a 2. El desequilibrio acidobásico agudo necesita
la normalidad. del tratamiento, independientemente del grado
de compensación, pues el mecanismo
En el siguiente ejemplo: compensa- dor se agota.
3. La hemogasometría es un medio auxiliar de
• pH 7,25 Acidosis diagnóstico, por lo que su interpretación debe
• PaCO2 35 mmHg Normal apoyarse en los resultados del examen clínico
• EB -10 meq/L Acidosis y no sólo en “las cifras”.

el primer diagnóstico es el de una acidosis metabó- El tercer diagnóstico o estado del factor compen-
lica, ya que las alteraciones del pH y EB resultan sador será analizado cuando se traten los aspectos
coincidentes. El factor compensador es la PaCO2, propios de cada alteración.
porque no fue utilizado para el primer diagnóstico y
se observa que no está funcionando, pues se encuen-
tra dentro de los límites normales, y la concluimos ACIDOSIS METABÓLICA
como una acidosis metabólica descompensada.
Concepto
• pH 7,30 Acidosis
Es un estado caracterizado por la ganancia de un
• PaCO2 25 mmHg Alcalosis
• EB -10 meq/L Acidosis ácido fuerte o la pérdida de una base.
Fisiopatología
En este otro ejemplo el primer diagnóstico es el
El metabolismo intermediario del adulto produce de 1
de acidosis metabólica, pero al analizar el factor
a 1,5 meq/kg al día del protón H+ en forma de
compensador (PaCO2) vemos que está funcionando
sulfatos, fosfatos y diversos ácidos orgánicos, que
(<35 mmHg), pero el pH no es normal; se concluye deben ser eliminados fundamentalmente por vía

67
renal. Los sistemas buffer del organismo se encar- eliminado más CO2 del que debía, lo que equivale a
gan de minimizar los cambios que en el pH pudiera decir que tiene una alcalosis respiratoria sobreaña-
provocar esta carga ácida en el organismo. Cualquier dida y se debe buscar su causa.
alteración que cause: Si los valores son superiores a 25 mm Hg,
• Hiperproducción de ácido (Cetosis, acidosis
vemos que el componente respiratorio del EAB ha
láctica) elimi- nado menos CO2 del que debía, lo que
• Pérdida de las reservas (Diarrea, acidosis
equivale a una acidosis respiratoria sobreañadida.
buffer tubular renal)
Si, por ejemplo, un paciente presenta los siguien-
• Excreción pobre de ácido (Insuficiencia
tes resultados gasométricos:
renal)
traerá como consecuencia un balance positivo de
• pH 7,25
+
), que desencadenará una acidosis me-protones (H
tabólica. • PaCO2 30 mmHg
• SB 10 mmol/L
El aumento de H+ provoca el del H
• EB -15
2
CO3 y del CO2
por ley de acción de masas, y el incremento de este
último estimula el centro respiratorio, con lo que el primer diagnóstico será el de una acidosis meta-
aparece una polipnea que disminuye el CO2 por hi- bólica; el segundo, que el trastorno está
parcialmente compensado, y el tercero, que
perventilación (mecanismo compensador). presenta una acidosis respiratoria sobreañadida, ya
que la PaCO2 debiera encontrarse entre 21 y 25
CO2 + H2O <— H2CO3 <— HCO3 mmHg y se encuentra en 30 mmHg (retención de
-
+ 3 H+ CO2 en relación con lo que debiera tener para ese
grado de trastorno).
Esta hipocapnia tiende a llevar el pH hacia lo nor-
mal, pero sin llegar a ese nivel en los trastornos agu- Para el análisis gasométrico bed side (junto al le-
dos. cho), se debe recordar que el añadir 15 a las cifras
de SB, reproduce los dos últimos dígitos del pH y
El patrón hemogasométrico contempla:
los valores de la PaCO2. Así, en un paciente con
• pH disminuido
SB en 10 meq/L, los valores de pH deben ser de
• PCO2 disminuida 7,25
• SB disminuido
• EB negativo (10 + 15 = 25) y la PaCO2 de 25 mmHg.

Efectos de la acidosis
mientras que el electrolítico muestra:
• Na+ disminuido Además de la polipnea con respiraciones
• Cl- normal o aumentado profundas, la acidosis provoca liberación de
• K+ aumentado si el ácido añadido es inor- adrenalina, lo que puede ser causa de
gánico. Normal o disminuido si el vasoconstricción e hipertensión arterial y
ácido añadido es orgánico. pulmonar. También actúa como depresor de la
contractilidad cardíaca cuando sus valores son
El diagnóstico hemogasométrico o del estado del inferiores a 7,20 y facilita la aparición de arritmias
factor compensador (PaCO2) se realiza mediante la ventriculares.
fórmula: El vómito es un síntoma común, aunque de me-
canismo desconocido.
Es habitual la leucocitosis por movilización del
PaCO “pool marginal” de leucocitos. La hipercaliemia
= 1,5 (HCO3 ) + 8 ± 2
-
2
apa- rece en las acidosis inorgánicas y en las
orgánicas
Si un paciente presenta cifras de SB de 10 meq/L, que se acompañan de deshidratación, insulinopenia
2
debe .
encontrarse entre 21 y 25 mmHg (1,5 la PaCO o insuficiencia renal. La hipercalciuria es común en
10 + 8 = 23 ± 2) para afirmar que existe una función la acidosis metabólica crónica.
normal del factor compensador. Si los valores La acidosis desvía la curva de disociación de la
hemogasométricos son inferiores a 21 mmHg, sig- hemoglobina hacia la derecha, lo que facilita la ad-
nifica que el componente respiratorio del EAB ha quisición de oxígeno por los tejidos.

68
Diagnóstico y clasificación hipoxia hística Acidosis normo o
fármacos hipercaliémica
En todo paciente portador de una acidosis metabóli- defectos metabólicos • Insuficiencia renal
ca, debe calcularse la brecha aniónica (aniones res- incipiente
tantes o aniones gap) mediante la fórmula: • Hidronefrosis
• Tratamiento con HCl
Brecha aniónica = Na+ - (Cl- + HCO 3-) . Normal: N H 4 Cl, Hidrocloruro de
12 ± 2 meq/L arginina o lisina
• Toxicidad por azufre
Si la brecha aniónica es normal, significa que se • Hipoaldosteronismo
ha producido pérdida de bicarbonato o ganancia de
un ácido cuyo anión acompañante es el cloro (aci-
dosis metabólica hiperclorémica). Si está aumenta- Tratamiento
da, entonces ha tenido lugar la ganancia de un ácido
En esta afección hay que tratar la causa que la
cuyo anión acompañante no es el cloro (acidosis
origi- nó, y la administración de sustancias
metabólica normoclorémica) (Fig. 5.1). Por lo tan-
alcalinizantes debe tener en cuenta las
to, el cálculo de la brecha aniónica permite clasifi-
condicionales clínicas, los resultados
car las acidosis metabólicas de la forma que se
hemogasométricos y la causa. El bicar- bonato de
presenta en el cuadro 5.1.
sodio (ámpulas de 20 ml al 4 y 8 % con 9,5 y
A-12 A-12 A-27 19 meq del producto, respectivamente) sigue
siendo el medicamento más recomendable.
Los meq que se deben administrar se calculan me-
HCO3- HCO -310 diante la fórmula de Astrup–Mellemgard:
-
25 HCO 3 10
meq = EB . peso en kg . 0,3
+ + +
Na Na Na
140 Cl- 140 Cl- 140 Cl- Del total calculado, se acostumbra a adminis-
103 118 103 trar 1/2 o 4/9 EV lento, con el objetivo de llevar el
pH a valores entre 7,20 y 7,30. Si éste se encuentra
2 por debajo de 7,00, se emplea el total de la dosis1
3
calculada.
Fig. 5.1. Composición plasmática en diversos tipos de acidosis En ambos casos debe realizarse una nueva
metabólica. 1. Normal. 2. Acidosis con brecha aniónica normal.
hemo- gasometría a los 30 min de usado el
3. Acidosis con brecha aniónica aumentada.
medicamento, para valorar los resultados de la
CUADRO 5.1 terapéutica.
ACIDOSIS METABÓLICA. LA BRECHA ANIÓNICA Otro método para el cálculo de la administración
Brecha aniónica Brecha aniónica de HCO3-, según el ionograma, es el siguiente:
aumentada normal
• Insuficiencia renal Acidosis hipocaliémica ml de NaCO H al 4 % para administrar = (35 -3
• Cetoacidosis: • Diarrea reserva alcalina) . peso en kg . 0,6
diabética • Acidosis poshipocápnica
ayuno • Inhibidores anhidrasa Si no se dispone siquiera de un ionograma, pero
alcohólica carbónica
se tiene el diagnóstico clínico de una acidosis meta-
bólica severa, entonces se pueden emplear 7 ml de
• Tóxica: • Acetazolamida
bicarbonato de sodio al 4 %/kg de peso del
alcohol metílico • Mafenide paciente, lo cual incrementa la reserva alcalina en
2
, MgCl2 10 meq/L. Algunos elementos que se deben
considerar en la
salicilatos • Ingestión de CaCl terapéutica son:
paraldehído o tratamiento con colesti- • En pacientes con acidosis láctica, la adminis-
formaldehído (formol) ramina tración de HCO3 - puede aumentar o perpetuar
etilenglicol • Acidosis tubular renal la acidosis, por lo que su uso está indicado si
• Acidosis láctica • Desviaciones ureterales

69
el pH es menor de 7,20 o la reserva alcalina es bicarbonato para evitar las manifestaciones de
menor de 12 mmol/L. En ella, la diálisis tetania.
-
peritoneal para sustituir el lactato por HCO3 • El lactato de sodio se presenta en ámpulas
(30 meq/L) es una buena indicación. Se ha en- de 20 ml con 83,5 meq. Para ser efectivo
sayado también con buenos resultados el di- nece- sita de una buena función hepática y
cloroacetato (DCA). que no existan hipoperfusión o hipoxia. Carece
• Simultáneamente a la corrección de la acido- de ven- tajas sobre el
3
HCO -.
sis, se puede emplear una dosis única de un • En las acidosis hiperclorémicas hay casi siem-
agente oxidante, como es el azul de metileno pre cierto grado de deshidratación, que debe
(ámpulas de 20 ml con 200 mg); se adminis- ser corregida evitando la administración no
tran de 1 a 5 mg/kg de peso, sin pasar de 300 mg con- trolada de Cl-, capaz de perpetuar la
en 24 h para no causar metahemoglobinemia, hiperclo- remia y la acidosis.
que agravaría la acidosis láctica. • La insuficiencia renal acidótica con K+ mayor
Otro agente oxidante utilizable luego del azul de 7 meq/L suele necesitar de tratamiento
de metileno es el ácido ascórbico (vitamina C). dialítico previo o concomitante con la admi-
Conviene recordar que la administración de nistración de HCO 3-, para evitar el aumento
adrenérgicos debe ser mínima, pues estimula brusco perjudicial de K+ intracelular.
la movilización de glucosa y la producción de • El empleo de CO H- puede eliminar la vaso-
lactato. 3
constricción adrenérgica de la acidosis, con
• El suministro de HCO -3 a pacientes hipoca- paso de ácidos a la circulación sistémica que
liémicos es capaz de agravar la hipocaliemia, disminuyen aún más el pH; de ahí que
por lo que se hace necesaria su corrección. sorpren- da el recibir el estudio gasométrico
• En insuficientes renales y cardiópatas puede evolutivo con un grado mayor de acidosis.
provocarse hipernatremia con sobrecarga hídri- Este fenóme- no se conoce como wash out
ca y falla ventricular, por lo que es posible que acidosis y se re- suelve administrando más
se necesite el tratamiento dialítico (con solu- HCO -. 3
ciones hipertónicas en caso de diálisis • El HCO3- no atraviesa la barrera hematoen-
peritoneal) para aliviar dicha sobrecarga. cefálica y es por ello que al ser administrado
• La administración de HCO 3- desvía la curva de se produce la llamada acidosis paradójica
disociación de la hemoglobina hacia la izquier- del LCR. Muchos han señalado esto para
da. En hipoxémicos graves esto empeora la hi- condi- cionar la no utilización de HCO - en
poxia hística, por lo que debe administrarse determi- 3
oxígeno suplementario. nadas situaciones, pero en el momento actual
• La acidosis por cetosis en el alcoholismo se re- se considera más una curiosidad bioquímica
suelve con dextrosa, por lo que sólo se admi- que un hecho clínico de interés.
nistra HCO3 si el pH es menor de 7,10.
-

• En la cetoacidosis diabética se emplea HCO3 -


si el pH es menor de 7,00 o la reserva ALCALOSIS
alcalina es inferior a 9 meq/L, a razón de 1
meq/kg de peso, hasta alcanzar valores de METABÓLIC
pH superiores a 7,00 o 14 meq/L de reserva
alcalina. Si con esta dosis no se logra que el A
pH alcance valores de 7,00, las dosis si-
Concepto
Constituye un proceso caracterizado por la ganan-
cia de una base fuerte, la pérdida de un ácido
fuerte,
o la ganancia exógena de HCO3 por los líquidos ex-
-

guientes se administrarán a razón de 0,5 tracelulares.


meq/kg de peso, hasta conseguir este valor
deseado. Fisiopatología
• En hipocalcémicos (insuficiencia renal crónica - es producido en el organismo en cantida-El HCO
3
-
disminuye el calcioy pancreatitis),
3
el HCO des apreciables solamente por el riñón y el estómago,
iónico, por lo que debe usarse calcio previo al

70
mediante la reacción de hidratación del CO2, significa que el componente respiratorio del EAB
catalizada por la anhidrasa carbónica. La resorción ha retenido menos CO2 del que debía, lo que
-
del H+ mantiene un balance fisiológico con el HCO equiva- le a decir que tiene una alcalosis
3
, respiratoria sobrea- ñadida.
pero si el Cl se elimina del organismo como sucede
- Si los valores son superiores a 47 mmHg, el
en caso de vómitos o si existe un aumento de la ex- com- ponente respiratorio del EAB ha retenido
creción renal de ácidos, el resultado final es el del más CO2 del que debía, entonces presenta una
-
en la sangre.aumento
3
del HCO acidosis respi- ratoria sobreañadida.
Otro mecanismo de producción de esta hiperbi- El límite de elevación de la compensación de la
carbonatemia es por medio de la administración al PaCO2 es hasta 55 o 60 mmHg (Torr).
paciente hipovolémico de aniones poco reabsorbi-
bles, como las penicilinas (fundamentalmente la Efectos de la alcalosis
-
,carbenicilina), o de alcalinos exógenos (HCO3 Este estado disminuye el calcio iónico y fomenta la
antiácidos, citratos de las transfusiones). liberación de acetilcolina, lo que aumenta la activi-
La alcalosis metabólica también puede ser pro-
dad neuromuscular y favorece la presencia de
ducida por retención renal de bicarbonato, como se
tetania y fasciculaciones (casi siempre con pH >
observa en: hipovolémicos, en los que el organismo
reabsorbe Na+ y HCO -3; aldosteronismo, donde se 7,55). Hay alargamiento del intervalo QT en el
retiene Na+ y HCO 3- excretándose K+ e H+, y aumento ECG, aparecen ondas U y aumentan las
posibilidades de intoxica- ción digitálica. En
de mineralocorticoides, calcio, o déficit de hormo-
na paratiroidea. algunos casos aparecen arritmias
-
provoca el del H
El aumento del HCO3 2
CO3 y espontáneas, sobre todo en momentos de tensión fí-
del CO2 por ley de acción de masas, lo que constitu- sica, anestesia o intervenciones quirúrgicas. La al-
ye la compensación respiratoria. calosis metabólica deprime la ventilación pulmonar
en individuos normales y en pacientes con
-
+ H+ +CO enferme- dad pulmonar obstructiva crónica (que
2
H2O<— H2CO3 <— 3 HCO3 ya son hi- percápnicos e hipoxémicos) y puede
El patrón gasométrico contempla: provocar un agravamiento de la hipercapnia y la
hipoxemia. En estos pacientes con EPOC, la
• pH aumentado
corrección de la alca- losis suele mejorar la
• PCO aumentada ventilación y obtenerse una recuperación clínica
2
• SB aumentado apreciable.
• EB positivo La alcalosis desvía la curva de disociación de la
mientras que el electrolítico muestra: hemoglobina hacia la izquierda durante un período
• Na+ normal o aumentado de 6 a 8 horas, lo que la hace más ávida por el oxí-
• Cl -
disminuido geno y perturba su entrega a los tejidos.
• K+ disminuido. Diagnóstico y clasificación
El cálculo de la brecha aniónica resulta normal o En esta afección era importante determinar los clo-
se encuentra poco ampliado. Puede asociarse una ruros en la orina (cuadro 5.2), ya que ello orientaba
hipomagnesemia. hacia la causa que perpetuaba el trastorno. En la ac-
El análisis del estado del factor compensador tualidad se prefiere evaluar la respuesta a la admi-
(PaCO2) se realiza mediante la fórmula: nistración de un “golpe de agua” de solución salina
fisiológica al 0,9 %, que es más rápida y coincide
PaCO32= 0,9 (HCO -) + 9 ± 2
con los resultados de dicho examen.
Si un paciente presenta cifras de SB de 40 meq/L, Esta alteración es una de las más frecuentes en la
la PaCO2 debe encontrarse entre 43 y 47 mmHg práctica clínica y se ha encontrado que la mortali-
[0,9 (40) + 9 = 45 ± 2] para afirmar que existe una dad por su causa se incrementa en la medida que
función normal del factor compensador. Si los valo- aumenta la alcalemia, la que resulta muy alta cuan-
res hemogasométricos son inferiores a 43 mmHg, do el pH está por encima de 7,65.

71
CUADRO 5.2 CUADRO 5.3
ALCALOSIS METABÓLICA Y CLORUROS ALCALOSIS METABÓLICA. ADMINISTRACIÓN
EN ORINA DE SOLUCIÓN SALINA

<20 meq/L >30 meq/L Que reaccionan Que no reaccionan


a la s. salina a la s. salina
• Pérdida de jugo gástrico. Con hipertensión arterial: (Cl- en orina < 20 meq/L) (Cl- en orina > 30 meq/L)
• Tratamiento diurético. • Aldosteronismo primario.
• Estado poshipercapnia. • Síndrome de Cushing. Alcalosis renal: 1. Variantes normotensivas:
• Pérdida de cloruro por • Ingestión de sustancia mine- • Inducida por diuréticos. • Hipocaliemia grave.
las heces fecales. ralocorticoide.
• Poshipercapnia. • Alcalosis de realimenta-
• Anión pobremente ción.
• Síndrome de Bartter.* reabsorbible. • Hipercalcemia.
Con presión arterial normal: • Dosis masiva de • Hipoparatiroidismo.
• Idiopática. esteroides. • S. de Bartter.*
• Síndrome de Bartter.* Alcalosis gastrointestinal:
• Pérdida de jugo gástrico. 2. Variantes hipertensivas:
* Adultos jóvenes con debilidad muscular, tetania, hipocalie- • Diarrea de cloruro. • Tratamiento con estróge-
mia y aumento de renina y aldosterona. Alcalosis por contracción. nos.
Alcalosis exógena. • Exceso de mineralocorti-
Tratamiento • Transfusiones. coides endógenos o exó-
• Antiácidos. genos (licorice, carbeno-
Debe recordarse que casi siempre en la alcalosis • HCO3- (polvo para hornear) xolona).
metabólica el volumen líquido extracelular se en- y Alka-seltzer.
cuentra disminuido y que coexiste una hipocloremia. • Sales de ácidos fuertes
Esto hace que la administración de solución salina (lactato de Na, citrato de Na, etc.).
sea un elemento no solamente diagnóstico, sino tam- • Hidróxido de Al + Kayexalate
bién terapéutico (cuadro 5.3). (por unión selectiva de H+).
El tratamiento de la alcalosis metabólica debe
* Puede ser hipertensivo.
comenzarse cuando el pH es superior a 7,50; hay
que tener en cuenta los siguientes principios: Si con estas medidas no se logran valores permi-
sibles de pH en 24 a 36 h, se aplicarán las que a
1. Alcalosis metabólica cloruro respondedora (Cl- continuación se señalan, sin descontinuar las ante-
en orina < 20 meq/L). riores.
a. Cuando el pH sea menor de 7,60: b. Cuando el pH sea de 7,60 o más:
• Restaurar el volumen extracelular si está • Cloruro de amonio (ámpulas de 20 ml
disminuido. con 83,5 meq). Se calcula por la fórmula
• Tratar de suprimir el factor causal. de Astrup-Mellemgard (meq = EB . peso
• Corregir la hipocloremia. en kg . 0,3) y se administra la mitad de la
• Corregir la hipocaliemia (preferiblemente
dosis calculada en solución de dextrosa
con cloruro de potasio).
al 5 % en 12 a 24 h, con estricto segui-
• Los pacientes alcalóticos que además pre- miento del equilibrio ácidobásico. No se
senten edema pulmonar o en los miem- debe utilizar en pacientes con disfunción
bros inferiores, se benefician con el uso hepática.
de acetazolamida (bloqueador de la anhi- • Ac. clorhídrico 1N (100 ml en 900 ml de
drasa carbónica), a razón de 250 mg EV dextrosa al 5 % = 100 meq/L). Esto pro-
cada 6 h. Posee el inconveniente de in- porciona una solución 0,1N y se calcula
crementar la pérdida de K+ por el riñón. la cantidad que se va a emplear según la
• Si las pérdidas gástricas no pueden con- fórmula de Astrup-Mellemgard o la si-
guiente:
trolarse, se utilizan bloqueadores H2 -
medido - 30)3 .meq = (HCO
(cimetidina, ranitidina, famotidina). (0,2 . peso en kg)

72
Se administra por una vena profunda, con
los mismos cuidados que con el cloruro ACIDOSIS
de amonio.
También se han utilizado el clorhidrato de
RESPIRATORI
lisina y el de arginina, que producen en A
su metabolismo ácido clorhídrico como
producto final.
• La hemodiálisis se ha usado para el trata-
Concepto
miento de alcalosis metabólicas graves, Es un proceso caracterizado por la disminución pri-
sobre todo cuando coexiste con intoxica- maria del grado de ventilación pulmonar con incre-
ción digitálica o hipercapnia graves. mento de la PaCO2, que tiene una evolución aguda
o crónica.
Estas medidas también se utilizan cuando el pH
Fisiopatología
es menor de 7,60 si:
Como consecuencia de la oxidación completa de
a) El paciente es portador de una hepatopatía avan- los principios inmediatos, el sujeto normal pro-
zada o una insuficiencia respiratoria. du c e 220 mmol/kg/día de CO2, lo que
b) Aparecen manifestaciones de irritabilidad neu- equivale a 15 000 o 20 000 moles que deben
romuscular con riesgo de crisis tetánica. eliminarse a diario del organismo a través de la
ventilación pul- monar. El ritmo de excreción de
c) Se acompaña de trastornos graves del ritmo car- CO es directa- mente proporcional a la
2
ventilación alveolar, por lo que cuando esta
disminuye, se provoca una re- tención de CO
díaco. en el organismo, que por ley de ac-
2
ción de masas ocasiona un aumento del H
d) Existe el peligro de intoxicación digitálica. 2
CO3 y
del HCO 3 como mecanismo compensador. Esta
-

2. Alcalosis metabólica cloruro resistente (Cl - en compensación metabólica está mediada por la re-
orina > 30 meq/L). absorción renal de HCO 3-, mecanismo que no fun-
Su terapéutica es mucho más difícil y comple- ciona a plena capacidad hasta 24 o 36 h después
ja. Se basa en: de iniciado el trastorno.

CO2 + H2O —> H2CO3 —> 3 HCO3 + H


- +

• Administrar grandes cantidades de cloruro


de potasio para evitar o corregir la hipoca- El patrón gasométrico contempla:
liemia. • pH disminuido
• Utilizar espironolactona (300 a 600 mg/día), • PCO aumentada
2
pues bloquea la acción mineralocorticoide • SB normal o aumentado
en estados hiperadrenales. También resulta • EB normal o positivo
útil el triamterene (200 o 300 mg/día). mientras que el electrolítico muestra:
• Corregir la hipomagnesemia o la hipocalce- • Na+ normal o aumentado
mia que pueden asociarse. • Cl -
disminuido
• En el síndrome de Bartter utilizar indometa- • K+ normal o aumentado.
cina (75 a 150 mg), por su acción inhibidora Característicamente se observa un incremento
de las prostaglandinas. del
• Eliminar quirúrgicamente la fuente de mine- fósforo sérico.
ralocorticoides (adenomectomía suprarrenal El análisis del estado del factor compensador
en el hiperaldosteronismo primario). -
) se realiza
3
mediante la fórmula:(HCO
PaCO2 medida - 40
-
= 25 3+ (1 ± 0,75 . ) HCO
10

73
en los trastornos agudos, y : CUADRO 5.4
ACIDOSIS RESPIRATORIA. CLASIFICACIÓN
SEGÚN LA DIFERENCIA ALVÉOLO-ARTERIAL
PaCO2 medida - 40± 4) HCO
—————————— + (4 3.
- DE OXÍGENO
= 2510
P(A-a)O2 Normal P(A-a)O2 Elevada
en los trastornos estables (más de 24 h de evolu-
Trastornos del SNC: Enfermedad pulmonar:
ción).
• Sobredosis de medicamentos • EPOC.
El límite de compensación es alrededor de 30 y • Hipoventilación primaria.* • Asma bronquial.
45 meq/L (mmol/L) para los trastornos agudos y • Traumatismos e infecciones. • Infecciones graves.
estables, respectivamente. • Accidentes vasculares • S. distress respiratorio agu-
Si este límite o el valor indicado por la fórmula es cerebrales. do.
sobrepasado, se debe sospechar una alcalosis meta- • Edema cerebral importante. • Tromboembolismo pulmonar.
bólica asociada; mientras que si el valor de la fór- •• Mixedema. • Enfermedad pulmonar in-
Enfermedad de la médula tersticial.
mula no es alcanzado, debe pensarse en una acidosis espinal. • Edema pulmonar intersti-
metabólica asociada o en un trastorno de corto tiempo • Neurotoxinas.** cial.
de evolución.
Trastornos del SNP: Enf. pulmonar y de la pared:
Cuadro clínico y clasificación • Sind. Guillain-Barré-Strohl. • Escoliosis.
• Esclerosis múltiple.
Los pacientes con hipercapnia aguda toleran menos • Esclerosis lateral amiotrófica.
el aumento de la PaCO2 que los que tienen hipercap- • Pospoliomielitis.
• Miastenia.
nia crónica, debido a la menor compensación de la • Botulismo.
primera. Los signos y síntomas que se producen son
los siguientes: Trastornos de la pared torácica:
Sistema neuromuscular: El aumento de la PaCO2 • Toracoplastia.
• Espondilitis anquilosante.
causa vasodilatación cerebral, lo que altera la con-
ciencia, y puede llegar al coma (narcosis por PaCO2 Trastornos de los músculos respiratorios:
> 70 mmHg). En los casos severos suelen encon- • Polimiositis.
trarse convulsiones y signos de hipertensión intra- • Distrofia muscular.
craneal (seudotumor cerebral) con hiperreflexia,
Obstrucción de la vía aérea superior:
papiledema y tendencia a la midriasis. También se • Epiglotitis.
observan temblores musculares y mioclonias. • Estenosis traqueal.
Sistema cardiovascular: Frecuentemente se en- • Trastornos laríngeos.
cuentra taquicardia, pulso saltón, HTA, aumento del • Esclerosis lateral amiotrófica.
gasto cardíaco y disminución de las resistencias
vasculares sistémicas, con piel caliente. La acidemia Mal funcionamiento de los ventiladores mecánicos.
e hipoxemia acompañantes a veces modifican estas
* Síndrome de Ondina.
manifestaciones. ** Tétanos, organofosforados.
En estos pacientes, un elemento que se debe con-
siderar es la diferencia alvéolo-arterial de oxígeno, ventilación alveolar y corregir en todo lo que se
que puede ser calculada mediante la siguiente fór- pue- da la retención de CO2.
mula simplificada si el enfermo respira aire ambien-
En los estados patológicos agudos se utilizará sin
tal sin suplemento de oxígeno:
retraso la ventilación artificial (invasiva o no) si se
observa un aumento progresivo de la PaCO2 o
P(A-a)O2 = 150 - (PaCO2 . 0,8) - PaO2
mani- festaciones del sistema nervioso por
y que permite la clasificación que se muestra en el hipercapnia. En los enfermos insuficientes
respiratorios crónicos agudizados (EPOC), la
cuadro 5.4.
conducta es más conserva- dora, pues éstos la
Tratamiento toleran mejor.
La administración de HCO 3- está indicada sola-
El tratamiento de la acidosis respiratoria tiene por
mente cuando el pH sea menor de 7,00 y no se dis-
objeto eliminar la causa precipitante, restablecer la
ponga de ventilación mecánica.
74
El uso de estimulantes respiratorios (doxapram) para los trastornos agudos y de 12 a 15 meq/L (mmol/L)
no está señalado en esta afección. para los estables. Debe sospecharse una acidosis
metabólica sobreañadida si se obtienen valores de
-
menores que los límites máximos de com-
HCO3
ALCALOSIS pensación; o una alcalosis metabólica sobreañadida
o un trastorno de corto tiempo de evolución, en
RESPIRATORIA caso contrario.

Cuadro clínico y clasificación


Concepto Las manifestaciones clínicas de este trastorno de-
Es un proceso en el cual está aumentado el grado de penden fundamentalmente de la enfermedad de
ventilación alveolar en relación con la producción base, pero pueden observarse:
de CO2. Sistema neuromuscular: La disminución de la
PaCO2 produce vasoconstricción cerebral, lo cual
Fisiopatología ocasiona confusión, hipodinamia, lipotimia y, en
La alcalosis respiratoria se caracteriza por hipocapnia ca- sos graves, convulsiones. Suelen existir
y es el resultado de la hiperventilación alveolar. Al parestesias peribucales, calambres en los miembros
-
,disminuir la PaCO disminuyen el H CO y el HCO inferiores y espasmos carpopedálicos. La
lo que constituye 2la respuesta compensadora.
2 3 3
Esta hipocapnia puede des- encadenar convulsiones y, si
es severa (PaCO < 15
compensación metabólica está mediada por la ex- mmHg), provoca hipoxia y edema cerebral. 2
creción renal de HCO3
-
, mecanismo que no inicia su Sistema cardiovascular: Se caracteriza por taqui-
funcionamiento hasta 6 h después de iniciado el tras- cardia sin cambios tensionales, a menos que el pa-
torno. ciente sea portador de un nódulo sinusal enfermo o
-
+ H++CO
H 2O H2CO3 3 HCO3 reciba tratamiento con digitálicos o -bloqueado-
2
res. También se presentan opresión torácica y de-
El patrón gasométrico contempla: presión del segmento ST por espasmo coronario,
• pH aumentado así como arritmias ventriculares graves
• PCO2 disminuida resistentes al tratamiento con antiarrítmicos, pero
• SB normal o disminuido que mejoran al corregir la alcalemia.
• EB normal o negativo Sistema digestivo: La hipoxemia cerebral de la
mientras que el electrolítico muestra: alcalosis respiratoria grave suele provocar náuseas
• Na +
normal o ligeramente disminuido y vómitos.
• Cl-
normal o aumentado El cálculo de la P(A-a)O
• K normal o ligeramente disminuido.
+
2
por el mismo método
Característicamente se observa una reducción del que se expuso en el tema precedente, permite la
fósforo sérico, incremento del ácido láctico y la cla- sificación que se muestra en el cuadro 5.5.
bre-
cha aniónica resulta normal.
El análisis del estado del factor compensador CUADRO 5.5
ALCALOSIS RESPIRATORIA. CLASIFICACIÓN
(HCO3 SEGÚN LA DIFERENCIA ALVÉOLO-ARTERIAL
-
) se realiza mediante la fórmula: DE OXÍGENO

40 - PaCO2 medida- P(A-a)O2 normal P(A-a)O2 aumentada


———————————)HCO - (23 .
= 2510 1. Trastornos del SNC. 1. Sepsis por gramnegativos.
2. Hormonas y medicamen- 2. Endotoxemia.
para los trastornos agudos, y
tos: 3. Insuficiencia hepática
• Salicilatos. aguda o crónica.
CO3H40 - PaCO2 medida- • Catecolaminas. 4. Enfermedad pulmonar inters-
= 25 - (5 .
———————————) • Sobredosis de analépti- ticial.
10
para los trastornos estables. Los límites máximos de cos o tiroides. 5. Edema pulmonar.
-
compensación son de 18 meq/L (mmol/L) de HCO3 • Progesterona. 6. Tromboembolismo pulmonar.
• Gestación. 7. Asma.

75
cont... Si por alguna razón no son convenientes los
3. Altitud 8. Neumonía bajos volúmenes corrientes (volet costal) o no
4. Anemia grave se soluciona el disturbio en 3 h con las medi-
5. Endotoxemia das mencionadas, se puede aumentar el espa-
6. Psicógena cio muerto mecánico colocando una manguera
7. Exposición al calor de 8 a 10 cm de largo y de 1 o 2 cm de diáme-
8. Ventilación mecánica tro entre el tubo endotraqueal y la “Y” del
ven- tilador.
Tratamiento
Por lo general el grado de alcalemia producido
por esta afección no es peligroso, pero cuando el pH TRASTORNOS
está por encima de 7,60, la PaCO2 por debajo
de 20 mmHg, o existen arritmias o manifestaciones ACIDOBÁSICOS MIXTOS
graves de hipocapnia del sistema nervioso, se debe
comenzar el tratamiento específico, que consiste en Estos trastornos no son más que la coexistencia si-
lo siguiente: multánea de dos o más de las alteraciones acidobá-
sicas simples que anteriormente se han analizado.
1. Corregir la causa que la provoca si es posible.
En general, tienden a ser mal interpretados y se les
2. Corregir la hipoxemia.
considera muchas veces como compensatorios de
3. Si es necesario el tratamiento específico, se co-
uno simple.
loca al paciente un cartucho de nylon que cu-
Para su comprensión y diagnóstico es imprescin-
bra su cabeza lo más herméticamente posible y
dible realizar un detallado análisis clínico del pa-
se le suministra oxígeno, previa abertura de
ciente y de las fórmulas de límites de
pequeños agujeros que impidan la sobredisten-
compensación que han sido señaladas en cada uno
sión excesiva del cartucho. Esto provoca un
de los trastornos simples.
aumento del espacio muerto, disminuye la ven-
Para su valoración se necesita lo siguiente:
tilación alveolar y aumenta la PaCO2.
1. Una historia clínica detallada (anamnesis y
Se realizan controles hemogasométricos exa- men físico).
seriados cada 30 min y de no obtener resulta-
2. Un ionograma con los siguientes datos:
dos satisfactorios en 2 o 3 h, se debe intubar y
a. Cl-.
ventilar al enfermo.
b. Bicarbonato (reserva alcalina).
Este método sólo debe utilizarse en pacientes
c. Na+.
conscientes que no tengan manifestaciones clí-
d. K+.
nicas graves.
e. Realizar el cálculo de la brecha aniónica.
Existen dispositivos tales como la “cámara ce-
fálica” y las máscaras de re-respiración, que 3. Una hemogasometría arterial.
4. El cálculo de los límites de compensación se-
sustituyen el cartucho mencionado.
gún el trastorno acidobásico que se considere
La administración de CO2 no está indicada, pues presente.
perpetúa la hiperventilación, al igual que pue- 5. Cálculo de los delta ) de Cl-, brecha
de ocurrir con los dispositivos anteriormente aniónica y bicarbonato.
señalados. Los tipos y causas principales de estos trastornos
4. Cuando existan manifestaciones clínicas gra- se presentan en el cuadro 5.6.
ves o el cuadro se acompañe de hipoxemia
severa, se debe ventilar el paciente con mo- CUADRO 5.6
dalidad controlada, volumen corriente (tidal) TRASTORNOS MIXTOS. CAUSAS
de 3 a 6 ml/kg de peso y frecuencia respirato-
1. Acidosis respiratoria + acidosis metabólica.
ria de 10 a 12/min. Se utilizará la FiO2 (frac- a. Paro cardiorrespiratorio.
ción inspiratoria de oxígeno) necesaria para b. Edema pulmonar grave.
corregir la hipoxemia y se controlarán los re- c. EPOC e hipoxemia.
sultados por medio de hemogasometrías.
76
cont... CUADRO 5.7
d. Intoxicaciones exógenas graves. LÍMITES DE COMPENSACIÓN
e. Acidosis metabólica con hipocaliemia grave (<2 meq/L). DE LOS TRASTORNOS ACIDOBÁSICOS SIMPLES

2. Acidosis respiratoria + alcalosis metabólica. Neumopatías Trastorno Elemento Valor límite del
primario compensador elemento
obstructivas crónicas en pacientes con as- piración
compensador
gástrica, vómitos o tratamiento con diuréticos.
Alcalosis metabólica PaCO2 55 - 60 mmHg
3. Alcalosis respiratoria + alcalosis metabólica.
Acidosis metabólica PaCO2 25 mmHg
a. Insuficiencia hepática con aspiración gástrica/vómitos o Acidosis respiratoria
terapéutica con diuréticos.
• Aguda HCO3
b. Pacientes ventilados, con aspiración gástrica, tratamien- • Crónica HCO3 - 30 mmol/L
to diurético o ambos. Alcalosis respiratoria - 45 mmol/L
c. EPOC hiperventilado. • Aguda HCO3
- 18 mmol/L
• Crónica HCO3 12 - 15 mmol/L
4. Alcalosis respiratoria + acidosis metabólica.
a. Shock séptico.
b. Tromboembolismo pulmonar en bajo gasto. 4. Que el valor del aumento del Cl- sea mayor que
el del HCO3 ( Cl >  HCO3 ).
c. Insuficiencia renal con sepsis grave. - - -
d. Intoxicación por salicilatos.
(Cl medido - 100) > (26 - HCO 3-)
-
e. Cirrosis hepática.

5. Acidosis metabólica + alcalosis metabólica. El tratamiento de los trastornos acidobásicos mix-


a. Insuficiencia renal crónica y vómitos. tos se basa en 2 principios fundamentales:
b. Vómitos y diarreas incoercibles.
c. Hipovolemia con vómitos o utilización de diuréticos.
1. Debe tratarse de normalizar el pH; de ahí que
los trastornos mixtos (acidosis respiratoria y
6. Acidosis metabólica mixta metabólica, alcalosis respiratoria y metabóli-
a. Acidosis metabólica hiperclorémica + acidosis meta- ca) sean los más graves, pues desvían el pH de
bólica con brecha aniónica aumentada.
• Diarrea o acidosis renal tubular + acidosis láctica.
forma importante hacia la acidez o la alcali-
• Cetoacidosis diabética en resolución. nidad.
• Diarrea + acidosis con brecha aniónica aumentada. 2. Debe evitarse que el tratamiento de un distur-
b. Acidosis metabólica hiperclorémica mixta. bio agrave el del otro. Esto no es fácil de
• Hiperalimentación y diarrea.
• Bloqueador de anhidrasa carbónica + enfermedad lograr en la práctica, pero ambos deben
renal o digestiva. tratarse si- multáneamente y hay que ser más
c. Acidosis metabólica con brecha aniónica aumentada enérgico con el que provoque manifestaciones
mixta. clínicas más graves o con el que predomine,
• Cetoacidosis + acidosis láctica.
• Intoxicación por metanol o salicilatos + acidosis según el valor del pH.
láctica.
• Uremia + acidosis con brecha aniónica aumentada.Se utilizan los mismos principios terapéuticos
esbozados en los trastornos simples, aunque el se-
Los elementos que permiten sospechar y diagnos-
guimiento gasométrico debe realizarse con mayor
ticar el trastorno mixto son:
periodicidad para poder valorar las modificaciones
1. La existencia de causas primarias para más de que la corrección de un disturbio le ocasiona al
un trastorno simple. otro. Se han descrito asociaciones triples, pero son
2. Que los límites de compensación sobrepasen o ra- ras y de difícil diagnóstico. Usualmente se
no alcancen los mostrados en el cuadro 5.7. realiza el diagnóstico de un trastorno metabólico
3. Que el valor del aumento de la brecha aniónica (acidosis/al-
sea mayor que la disminución del HCO 3
-
(ca- calosis) y al calcular la PaCO
se aprecia uno respi-
da meq/L de ácido añadido debe disminuir en 2

la misma cantidad el HCO -3. Equivale a  BA ratorio sobreañadido. Si a esto se adiciona que el
delta del Cl -
o de la brecha aniónica resulta distinto
>  HCO3-. al del bicarbonato, entonces se diagnostica un tras-
(Brecha aniónica - 12) > (26 - HCO3 medido)
-
torno triple. Para facilitar su interpretación se ha re-
currido al diseño de programas de computación.

77
6
NUTRICIÓN ARTIFICIAL
Concepto Bronconeumonía  Sepsis  Insuficiencia
gene- ralizada  Insuficiencia múltiple de
Se conoce como nutrición artificial al método tera-
órganos  Muerte.
péutico que persigue obtener un balance proteico y
energético adecuado en el enfermo que no puede
Cuando después de realizada la evaluación nutri-
ingerir alimentos, o su ingestión es insuficiente por
cional y metabólica de un enfermo, éste sea tributa-
la vía fisiológica, o sea, la oral, y por tanto, es nece-
rio de algún método de nutrición artificial, se deben
sario administrarle los nutrientes por una vía artifi-
considerar las posibilidades mostradas en el algorit-
cial.
mo de la figura 6.1.
Clasificación
Nutrición parenteral
1. Nutrición parenteral: los nutrientes son admi-
nistrados por la vía EV. ¿Alteración orgánica? Sí Dieta en condiciones
2. Nutrición enteral: los nutrientes son suminis- especiales:
 • Insuficiencia renal.
trados mediante sondas que abordan la vía di- • Insuficiencia
gestiva por diferentes lugares. No repiratoria.
3. Nutrición mixta: cuando se emplean ambas mo- • Insuficiencia hepática.
dalidades a la vez.  • Insuficiencia cardíaca.
• Politraumatizado.
Sistema digestivo funcionante
Todos los pacientes y especialmente los graves,
deben recibir el tratamiento específico para la en- 
fermedad que los puede haber puesto en una situa- Sí No
ción crítica. Sin embargo, un número importante de 
Apetito presente Nutrición parenteral
estos enfermos, a pesar de tener un adecuado trata-

miento y de estar atendida la totalidad de sus de- Sí No Central Periférica
mandas hidroelectrolíticas, no consiguen superar el
enorme deterioro metabólico que padecen. Muchos Dieta Dieta mediante
de ellos, tras una larga estadía hospitalaria, fallecen especializada sondas
en un estado de gran demanda metabólica y con mal-
nutrición severa. Fig 6.1. Guía práctica para la nutrición parenteral.
Es por ello que no existe la menor duda de que el
apoyo nutricional es un pilar básico del tratamiento NUTRICIÓN
médico y un importante factor que se debe tener pre-
sente en la medicina preventiva.
PARENTERAL
En el paciente grave hay que romper el siguiente
ciclo fatal: El desarrollo de la nutrición parenteral (NP) ha sido
posible debido a varios descubrimientos efectuados
Déficit calórico proteico  Debilidad muscular en los albores del siglo xx, que facilitaron el actual
 desarrollo de las infusiones endovenosas.
Disminución capacidad ventilatoria  Atelectasia

78
• El esclarecimiento por Starling de la función A pesar de los avances tecnológicos actuales, el
coloidosmótica de las proteínas plasmáticas. preparado nutritivo ideal no existe. Dicho
• Los conceptos de microbiología de Pasteur nutrimento tendría que cumplir los siguientes
(1860). requisitos:
• La aplicación de los principios de asepsia y an- • Imposibilidad de reacción química con otras
tisepsia de Lister (1870). sus- tancias.
• La determinación de los grupos sanguíneos por • Imposibilidad de crecimiento bacteriano.
Landsteiner y Weiner. • No ser irritante a la pared vascular.
• El descubrimiento de los pirógenos por Subert. • No reaccionar con los materiales plásticos.
A partir de estos pasos iniciales son apasionantes • Ser utilizado por todos los tejidos.
los éxitos y los escollos encontrados. No es hasta • Tener elevado valor energético.
la década de los 60 del siglo pasado que • No tener efectos secundarios.
Dudrick, Wilmore, Rhoads y Vars hacen los • Poseer un umbral renal elevado.
aportes esencia-
les de lo que hoy conocemos como NP. RECOMENDACIONES DE LA AMERICAN
MEDICAL ASSOCIATION PARA LA NP
Los avances obtenidos han permitido el perfec-
cionamiento de la calidad y variedad de los productos Substrato Requerimientos
de infusión, incluyendo vitaminas, oligoelementos (kg/día) adultos
y otros, además de la utilización de nuevos y más
Agua 30-45 ml
eficaces métodos que permiten realizar la NP pro- Na 1-3 mmol
longada y ambulatoria de ser necesaria, con reduc- K 1-1,5 mmol
ción de las complicaciones al mínimo. Mg 0,05-0,1 mmol
Ca 0,05-0,1 mmol
Cl 1-3 mmol
Concepto P 0,2-0,5 mmol
La NP se define como la modalidad terapéutica que Oligoelementos Adultos (por día)
Zn 2,5-4 mg
permite la administración de nutrientes por vía EV
Cu 0,5-1,5 mg
para lograr un balance proteico-calórico adecuado. Cr 10-15 mcg
Clasificación Mn 0,15-0,8 mcg
Vitaminas Adultos (por día)
Existen múltiples clasificaciones de la NP. Mencio- Retinol 3 330 UI
naremos 2 de ellas: Calciferol 00 UI
Tocoferol 10 UI
I. Según la vía de administración: Filoquinona 2-4 mg/sem. No con cumarina.
1. Central: cuando los nutrientes son pasados a Ácido ascórbico 100-400 mg
Ácido fólico 400 mcg
través de una vena profunda. Niacina 40 mg
2. Periférica: cuando se utiliza una vena peri- Riboflavina 3,6 mg
férica, que limita la calidad y cantidad de Piridoxina 4 mg
Tiamina 3 mg
las soluciones. Cianocobalamina 5 mcg
II. Según los nutrientes utilizados: Ácido pantoténico 15 mg
1. Total: cuando se suministran las necesida- Biotina 60 mcg
des proteico-calóricas del enfermo mediante
soluciones de aminoácidos y carbohidratos.
2. Completa: cuando se emplean los 3 princi- Indicaciones
pios básicos: carbohidratos, proteínas y 1. Todo enfermo que transcurrido el quinto día
lípidos. de la injuria inicial, no le haya sido posible
3. Parcial: cuando se suministra solamente uno co- menzar con la dieta oral o enteral.
de los principios inmediatos. 2. Enfermos con dificultad para utilizar la vía di-
gestiva:
• Síndrome de malabsorción severa.
79
• Enfermedad inflamatoria intestinal grave. • Requieren de una vía venosa profunda.
• Fístulas intestinales de alto flujo. • Son soluciones ácidas porque utilizan ácidos
• Estenosis gastrointestinales. como preservo.
• Anorexia nerviosa. • Su retirada debe ser gradual, pues se corre el
• Íleo intestinal. riesgo de hipoglicemia.
• Operaciones de la vía digestiva. • Las necesidades insulínicas son mayores en el
• Peritonitis. paciente séptico y se relacionan de forma di-
• Pancreatitis necrohemorrágica. recta con el empeoramiento o mejoría de la
• Síndrome de intestino corto, etc. sepsis.
3. Enfermos en estado catabólico severo: • No se recomiendan más de 700 o 750 g de
• Grandes quemaduras. dex- trosa por día.
• Politraumatismos. • Al diabético insulinodependiente se le sumi-
• Sepsis grave. nistra su dosis de base de insulina lenta, la que
• Traumatismo craneoencefálico. se aumenta según sus necesidades.
• Operaciones de gran envergadura. • Las causas más frecuentes de hiperglicemia
• Desnutridos severos, etc. son: diabetes mellitus, pancreatitis, sepsis,
uso de esteroides, déficit de cromo, etc.
Es necesario aclarar que se inicia con NP cuando
al quinto día de una injuria, no ha sido posible co- RECOMENDACIONES PARA LA ADMINISTRACIÓN
menzar la nutrición del enfermo; pero si desde su DE CARBOHIDRATOS
llegada el médico sospecha que la vía digestiva no
Sustancias Dosis (adultos) Ritmo de infusión
va a estar disponible al quinto día, es menester em-
Glucosa 6 g/kg/día 0,50 g/kg/h
pezar con ella inmediatamente después de estabili-
Fructosa 3 g/kg/día 0,25 g/kg/h
zado el paciente.
Sorbitol 3 g/kg/día 0,25 g/kg/h
Xylitol 3 g/kg/día 0,25 g/kg/h
Carbohidratos en la NP
Gamble demostró que la administración de carbohi-
dratos al enfermo catabólico disminuye la gluco- Aminoácidos en la NP
neogénesis. Como esta está incrementada en • En la NP los aminoácidos son administrados
situaciones de stress, la glucosa es incluida en la NP en solución acuosa.
no sólo con el objetivo de brindar energía utilizable, • Los aminoácidos en esas soluciones tienen la
sino también para aprovechar su efecto ahorrador configuración estereoquímica L necesaria para
de proteínas. la síntesis proteica.
La sobredosis de dextrosa puede causar aumento • No elevan la osmolaridad del plasma ni la pre-
de la lipogénesis, pues el organismo sintetiza trigli- sión oncótica, a diferencia del plasma y la al-
céridos a partir de glucosa. Este proceso ocurre a búmina.
nivel hepático y del tejido adiposo, y se asocia a una • En ocasiones se usan pequeñas dosis por vía
elevada producción de CO . La infiltración grasa2
enteral.
aparece en el hígado cuando este órgano es incapaz
• Pueden adicionarse electrólitos.
de liberar los triglicéridos hacia el torrente circula-
torio. Algunos autores recomiendan aportar una frac- • Se pueden pasar por una vena periférica por
ción de los carbohidratos mediante infusiones de períodos menores de 5 días.
fructosa, sorbitol o xylitol. • La administración única es desviada hacia
Precauciones: la gluconeogénesis en el paciente falto de
energía.
• Las soluciones de dextrosa hipertónicas (30, 50,
• Dosis recomendadas en adultos: 2 g/kg/día.
70 %) necesitan 1 unidad de insulina simple
por cada 5 a 10 g de glucosa. • Ritmo de infusión: 0,1 g/kg/hora.
80
Emulsiones grasas en la NP GUÍA PRÁCTICA PARA LA NP
Las grasas son administradas en forma de emulsiones
de lípidos. Contienen gotas de grasa con triglicéri- Principios inmediatos Estado normal Hipercatabolia
dos en el núcleo, rodeados de una capa de fosfolípidos.
Agua 20-45 ml/kg/día 30-50 ml/kg/día
El fosfolípido llamado emulsificador evita la coa-
lescencia de las gotas en virtud de una carga eléctri- Calorías 25-30 kcal/kg/día 30-50 kcal/kg/día
ca uniforme dirigida hacia la fase acuosa. Después
Carbohidratos 2-3 g/kg/día 5-7 g/kg/día
de la infusión de la emulsión grasa, las gotas son
procesadas en igual forma que los quilomicrones. Proteínas 1-2 g/kg/dia 2-3 g/kg/día
La utilización de los lípidos en la actualidad re-
sulta de uso común en la NP. Inicialmente su em- Grasas 1-2 g/kg/día 3 g /kg/día
pleo se basó sólo en el aporte de los ácidos grasos Planificación de la nutricional
esenciales. parenteral
El déficit de ácidos grasos esenciales provoca
dermatitis difusa, alopecia, anemia hemolítica, au- La NP se efectúa mediante variados esquemas tera-
mento de la agregación plaquetaria, retardo en la péuticos, que alcanzan desde métodos simples
cicatrizacion, incremento del riesgo de infecciones hasta otros más complejos y estandarizados. Lo
y diseritropoyesis. ideal es el método personalizado, en el cual el
Otras razones para su inclusión en la NP son: médico de asistencia, con la ayuda del equipo
multidisciplina- rio de nutrición, diseña una dieta
• Permiten reducir el empleo de glucosa, lo que para cada enfermo y cada situación. Esto es válido
disminuye el cociente y el trabajo respiratorios. también para la nu- trición enteral.
• La reducción de glucosa favorece el control me- Es obvio que el método que se elija dependerá
tabólico de ésta y disminuye el riesgo de diu- de la experiencia, desarrollo y condiciones
resis osmótica. Las soluciones de lípidos son económi- cas con que cuente el personal a cargo.
isosmóticas y no se excretan por el aparato A continuación se exponen los principios gene-
renal. rales:
• Se pueden administrar por una vena periférica.
1. Previamente se realizan los cálculos de las
Hay que tener en cuenta, al utilizarlas, lo siguiente: can- tidades de líquidos y de electrólitos que
se van a administrar, los que dependerán de
• La administración única de lípidos produce aci-
factores como el grado de hipercatabolia, las
dosis metabólica.
• En tratamientos prolongados se dice que a ve- cuantías de las pérdidas insensibles, la diuresis,
ces disminuye el conteo de plaquetas. etc. Debe recordarse que en el enfermo grave
• Las necesidades diarias de ácido linoleico en hay situa- ciones que impiden un aporte libre
un adulto son de 7 a 10 g, aunque puede llegar- de líquidos, como son el edema pulmonar o
se hasta 12 a 15 g si la agresión es severa. cerebral, la in- suficiencia cardíaca, el fallo
• La relación 7:1 de ácido linoleico/ácido linolé- renal, etc., que complican la situación y que
nico en el aceite de soja es igual a la de la leche precisan de un ma- nejo especializado.
materna. 2. Las necesidades metabólicas (calorías) se calcu-
• Los triglicéridos de cadena media (TCM) han lan de acuerdo con uno de los métodos que
encontrado un lugar en la NP debido a la sen- exis- ten al respecto.
cillez de su metabolismo, pues son fácilmente 3. A continuación se realizan los cálculos de los
hidrolizados y oxidados. requerimientos de carbohidratos, proteínas y
• Dosis recomendadas en el adulto: 2 g/kg/día. lípidos.
• Ritmo de infusion: 0,15 g/kg/hora.

81
Se procede entonces al cálculo de la relación en- • La afección que provocó la indicación
tre las calorías administradas por cada gramo de ni- nutri- cional.
trógeno: • La eliminación de la vía oral, lo cual es ca-
Rel kcal / N2 paz de conducir al enfermo a serios trastor-
nos mentales que incidirían de forma
Es conveniente recordar que 1 g de nitrógeno está negativa en su evolución.
contenido en 6,25 g de proteínas. En sentido gene- 4. Las soluciones de lípidos deben terminar al
ral es aceptado que la Rel kcal/N2 óptima es 120. menos 6 h antes de realizar su control median-
Esto significa que por cada 120 calorías suministra- te el test de turbidez plasmática, pues podría
das, se debe aportar 1 g de nitrógeno. resultar un falso positivo.
Es juicioso, aunque no estrictamente necesario, 5. Las manipulaciones del abordaje venoso y de
administrar el primer día la mitad de las calorías las soluciones deben cumplir las más estrictas
calculadas. Hay quienes prefieren comenzar con las medidas de asepsia y antisepsia. Por sus
soluciones dextrosadas y luego introducir de forma carac- terísticas, estas soluciones son un
escalonada los aminoácidos y lípidos en ese orden, magnífico medio de cultivo.
en días sucesivos según su experiencia. 6. El catéter del abordaje venoso debe ser utiliza-
do únicamente para la NP.
4. Las vitaminas hidrosolubles se administran por
vía EV desde el primer día de la NP. Se pueden En tiempos más recientes y en la medida de su
adicionar a las soluciones glucosadas. La vita- propio desarrollo, la nutrición artificial ha escapado
mina C no se debe mezclar con la B12, pues
de las UCI y llegado a una etapa cualitativa supe-
ésta se inactiva por los procesos de óxido-re- rior. Se han creado los Servicios de Nutrición, que
ducción de la primera. especializan su tarea y brindan su apoyo al médico
5. Las vitaminas liposolubles se añaden luego de de cabecera.
transcurrida la primera semana con NP. Sin dudas el desarrollo tecnológico también ha
6. Los oligoelementos son obligatorios luego de la sido determinante, pues se han perfeccionado los
primera semana, pero pueden emplearse desde centros de preparación de mezclas de nutrientes,
el primer día según el estado físico del enfermo. los cuales deben poseer técnicas de control y
7. A partir de la segunda semana se debe admi- monitoreo eficaces.
nistrar una unidad de plasma cada 2 semanas La manipulación debe ser en su totalidad
con el objetivo de aportar factores de la coagu- confiable y para eso se emplean las campanas de
lación. Es un error considerar al plasma como flujo de aire laminar. Más recientemente se
un nutriente por su aporte de albúmina. comercializan las bolsas multinutrientes, en las
que con sólo romper el sello se realiza la mezcla,
Precauciones que requiere por lo que la manipula- ción resulta muy sencilla.
Tienen el inconveniente de su elevado precio.
la nutrición parenteral Las ventajas que reportan los centros de mezcla son:
1. De no emplearse bolsas para mezclas de 1. Incrementa el tiempo disponible del personal
nutrimentos, las soluciones que aportan calo- de enfermería.
rías, fundamentalmente las glucosadas, deben 2. Racionaliza los costos por litro de infusión.
administrarse de forma conjunta con las solu- 3. Aumenta el grado de cumplimiento de la pres-
ciones proteicas, por la misma vena o no, para cripción.
que estas no se utilicen en la obtención de ener- 4. Reduce los tiempos de preparación.
gía tal como se ha explicado con antelación.
2. Si por alguna razón el goteo de las infusiones se Mecanismo funcional de las Unidades de Mez-
atrasa, no se debe acelerar con posterioridad, clas Intravenosas (UMIV):
pues se producirían alteraciones metabólicas.
3. Es muy importante el apoyo psicológico del 1. Prescripcion. El médico identifica el
enfermo, pues hay, entre otros, dos factores que problema e interviene nutricionalmente.
inciden negativamente sobre éste:
82
2. Preparacion. La UMIV confecciona las dietas. c) Otros: embarazo, úlcera gastroduodenal san-
3. Dispensacion. Se clasifican de acuerdo con los grante.
requerimientos nutricionales, Rel kcal/N2, enferme- 3. Aminoácidos: hepatopatías.
dades, etc. 4. Relativa: síndrome de bajo gasto.
4. Monitorizacion. Se facilita la monitorizacion 5. Precaución: insuficiencias renal o hepática.
y, por tanto, el control de calidad.
Complicaciones
Monitorizacion de la nutrición
Dependientes del abordaje venoso
parenteral
1. Superficial: hematoma, punción arterial, abs-
La monitorización varía de acuerdo con las condi- ceso, celulitis, flebitis, trombosis venosa, le-
ciones específicas de cada lugar y según la expe- sión nerviosa periférica.
riencia del equipo de nutrición. 2. Profundo:
Como regla general, sugerimos: • Vía superior: nemotórax, punción arterial,
• Hemograma. Inicialmente diario. Luego, 2 ve- he- matoma, hemotórax, quilotórax, sepsis
ces por semana. de la zona, lesión del plexo nervioso,
• Benedict cada 4, 6 u 8 h. embolismo aéreo, embolismo del catéter,
• Glicemia cada 12 o 24 h. Luego de estabiliza- obstrucción del catéter, trombosis venosa,
da, 2 veces por semana. sepsis genera- lizada.
• Vía inferior: igual, menos las lesiones torá-
• Urea o creatinina en el plasma diario.*
cicas.
• Urea o creatinina en la orina diaria.*
• Ionograma en sangre y en orina diarios.
Alteraciones metabólicas.
• Calcio y fósforo plasmáticos semanalmente.
1. Dependientes de los glúcidos:
• Estudios de la función hepática cada semana. • Hiperglicemia. Generalmente se debe a una
• Test de turbidez plasmática diariamente si se
dosis insuficiente de insulina, a un ritmo rá-
emplean lípidos. Si test positivo, se suspenden
pido de infusión o a la presencia de sepsis.
los lípidos hasta su aclaramiento o se adminis-
• Hipoglicemia. Se puede deber a dosis eleva-
tra heparina sódica a razón de 1 mg/kg de peso,
das de insulina, retirada de las soluciones
o ambos.
de dextrosa hipertónica, mejoría de la
• Hemogasometría arterial. Al menos 1 vez al día. sepsis.
• Otros, según el estado del enfermo y la enfer-
• Diuresis osmótica.
medad de base.
• Deshidratación.
Contraindicaciones • Cetoacidosis.
2. Dependientes de las proteínas:
La NP está contraindicada de forma general en los
• Acidosis metabólica.
enfermos que presenten alteraciones severas del es-
• Desequilibrio de aminoácidos séricos.
tado hemodinámico, del equilibrio acidobásico, del
• Hiperamoniemia.
equilibrio hidromineral, del estado metabólico, etc.
• Azotemia prerrenal.
1. Carbohidratos. No hay contraindicaciones, in- 3. Dependientes de los lípidos:
cluyendo la diabetes mellitus. • Déficit de ácidos grasos esenciales.
2. Lípidos. • Embolismo graso.
a) Lesiones vasculares: IMA reciente, AVE re- • Síndrome de sobrecarga, caracterizado por
ciente, aterosclerosis avanzada y trombofle- dolor torácico, cianosis, disnea, fibre, hiper-
bitis. lipemia.
b) Trastornos del metabolismo de los lípidos.
Otras complicaciones
• Alteraciones electrolíticas: Na, Cl, Mg, K, etc.
*Para realizar el balance nitrogenado diario.
• Sangramiento.
• Anemia.
83
Se considera una NP efectiva, cuando concurren 2. Estado nutricional normal con ingesta infe-
los siguientes indicadores: rior al 50 % de los requerimientos durante 7
1. Aumento de peso superior en un 15 % del ini- o 10 días previos a la indicación.
cial. 3. Disfagia severa por cualquier causa.
2. Cifras de hemoglobina > 100 g/L. 4. Fístulas enterocutáneas de bajo flujo.
3. Cifras de albúmina > 4 g/L. 5. Resecciones del intestino delgado (inferio-
4. Balance nitrogenado neutro o positivo. res al 70 %).
6. Otras: politraumatismos, enfermedad infla-
Inconvenientes de la NP: matoria intestinal, pancreatitis aguda con mo-
1. Provoca alteraciones de la función hepática. tilidad gastrointestinal.
2. Disminuye el poder de concentración del riñón.
3. Hay menor respuesta a la oxigenoterapia. Contraindicaciones
4. Se favorecen las úlceras gastrointestinales agu-
das. I. Generales.
5. Se favorece la atrofia intestinal con disminu- 1. Desequilibrios hidromineral, acidobásico y
ción de la absorción. metabólico severos.
6. Se favorece la translocación bacteriana. 2. Shock.

II. Específicas.
1. Peritonitis difusa.
NUTRICIÓN ENTERAL 2. Obstrucción intestinal mecánica.
3. Íleo paralítico.
Concepto 4. Hemorragia gastrointestinal.
La nutrición enteral (NE) es el método terapéutico 5. Diarrea severa.
mediante el cual los nutrientes son introducidos en
el tracto gastrointestinal para su absorción y asimi-
Clasificación
lación, generalmente a través de sondas. I. Poliméricas.
Las dietas enterales deben cumplir los requisitos 1. Normoproteicas.
siguientes: • Normales.
• Homogeneizadas de proteína entera.
1. Ser mezclas de nutrientes definidos, estandari- • Con fibra añadida.
zados, con una relación adecuada entre canti- • Hipercalóricas.
dad y calidad. 2. Hiperproteicas.
2. Ser hidrosolubles y reunir condiciones para su • Normales.
administración por sondas a veces muy finas. • Con fibra añadida.
3. Ser capaces de constituir la única fuente de nu- • Con TCM.
trientes permitiendo un balance metabólico ade- II. Oligoméricas.
cuado. Más fáciles de digerir, por lo que son útiles para
su utilización en el intestino delgado.
Indicaciones
1. Oligoméricas peptídicas.
Según la ASPEN ( American Society for Parenteral • Normoproteicas.
and Enteral Nutrition), son las siguientes: • Hiperproteicas.
I. Generales. 2. Oligoméricas elementales. Es posible que
1. Imposibilidad para la ingestión adecuada de sean las más utilizadas por sus amplias po-
nutrientes por la vía oral.
sibilidades de uso y relativamente fácil ab-
2. Contar con un tracto digestivo en condicio-
sorción y asimilación.
nes de uso seguro y efectivo.
III. Dietas especiales.
II. Específicas.
1. Malnutrición con ingestión oral de alimen- • Stress metabólico alto.
tos insuficiente durante los 5 días previos a • Insuficiencia hepática.
la indicación. • Insuficiencia renal.
84
• Insuficiencia respiratoria. • Enfermedad isquémica intestinal.
• Diabetes mellitus. • Síndrome de malabsorción.
• Inmunomodulación. 2. Funcionamiento gastrointestinal parcial.
• Con arginina, etc. • Síndrome de intestino corto.
IV. Dietas modulares. • Al inicio de posgastrectomía parcial.
V. Suplementos dietéticos. • Fístulas enterocutáneas.
Son preparados comerciales de uso más sen- 3. Hipercatabolia.
cillo y, por tanto, no necesitan de especializa- • Sepsis.
ción ni monitorización estricta. • Politraumatismo.
• Hiperproteicas. • Quemados severos.
• Hipercalóricas. 4. Transición de la NP a la nutrición oral.
• Especiales.
• Pudines y cremas. Vías de acceso en la nutrición enteral
• Sopas y purés. I. Para soporte nutricional de corta duración (< 4
semanas).
Se debe considerar que las dietas culinarias que 1. Nasogástrica.
se confeccionan en la cocina de algunos centros hos- 2. Nasoduodenal.
pitalarios, no constituyen una formulación enteral 3. Nasoyeyunal.
propiamente dicha, pero hay que tenerlas presente, II. Para soporte de larga duración.
pues se han utilizado por años con relativo éxito en 1. Faringostomía.
los lugares en que no se ha contado con los prepara- 2. Esofagostomía.
dos farmacológicos. 3. Gastrostomía.
Un ejemplo práctico entre las múltiples formula- 4. Duodenostomía.
ciones existentes que se han empleado con resulta- 5. Yeyunostomía.
dos satisfactorios es:
• Dieta 1. Con cereal (para 1L): Planificación de la nutrición enteral
• Leche en polvo entera: 30 cucharadas (150 g). El cálculo de los requerimientos hídricos, calóricos
• Maicena: 8 cucharadas (64 g). y proteicos, se hará de forma similar a la NP.
• Azúcar refino: 1 cucharada (12 g).
Se disuelve la leche en 500 ml de agua tibia y Para la NE se recomienda una Rel kcal/N = 150.2
luego se añade el resto de agua. Se adiciona El médico de asistencia podrá efectuar las ade-
cuaciones pertinentes.
entonces la maicena y el azúcar, y se cocina a
fuego lento removiéndola de forma constante El tipo de dieta que se va a utilizar depende de:
hasta que espese muy ligeramente. Su Rel kcal/ 1. Los recursos disponibles.
N2 = 137. 2. La afección del enfermo.
3. La vía de abordaje del tracto gastroin-
• Dieta 2. Con leche, miel y huevo: testinal.
• Leche en polvo entera: 30 cucharadas (150 g). Los métodos de inicio y progresión de la dieta
• Miel de abejas: 4 cucharadas (80 g). han evolucionado en los últimos años. Al inicio de
• Huevo: 1 unidad (50 g). la NE se comenzaba con dietas hipotónicas a ritmo
Se diluye la leche en 500 ml de agua tibia y bajo y se aumentaba progresivamente la osmolari-
luego se adiciona el resto del agua. Se añade dad y el ritmo de infusión, hasta llegar al aporte
entonces el huevo y la miel. Rel kcal/N2 = 122. com- pleto después de la primera semana de
tratamiento. Este sistema retarda el suministro total
Indicaciones de las dietas de los reque- rimientos y no es necesario, a menos
elementales que se presen- ten signos de intolerancia.
1. Enfermedades gastrointestinales. El régimen de adaptación en 3 días no ha encon-
• Colitis ulcerativa aguda. trado mayor incidencia de complicaciones y se re-
• Enfermedad de Crohn. comienda el incremento progresivo en el ritmo de
• Infección crónica intestinal. infusión.
85
Las cifras de aspiración gástrica mayores de 200 ml 3. Neuroendocrinos:
por sonda nasogástrica o de 100 ml en gastrostomías, • Favorecen: gastrina, secretina, colecistocini-
deben ser consideradas como signos de intole- na, glucacón.
rancia. • Enlentecen: los mediadores lesionales del
Lo ideal es efectuar el suministro de las dietas me- tabolismo cerebral y el aumento de la
mediante bombas de infusion, para lo cual se reco- pre- sión intracraneal.
mienda el siguiente esquema: 4. Patológicos:
• Inicio: 20 ml/h (las primeras 8 h). • Intrínsecos: gastropatías.
• Progresión: 30 ml/h durante 6 h. • Extrínsecos: consecutivos a lesión del peri-
40 ml/h durante 6 h. toneo.
50 ml/h durante 6 h. 5. Farmacológicos:
70 ml/h durante 6 h. • Estimuladores del vaciamiento: procinéticos
• Ritmo de infusión final: según los requerimien- (metoclopramida), reserpina.
tos. • Inhibidores del vaciamiento: anestésicos,
analgésicos, anticolinérgicos (atropina),
El método intermitente se realiza mediante “bo- sim- paticomiméticos, antiácidos.
los”. Se sugiere el siguiente esquema: • Hipotensores.
• Antihistamínicos.
Paso Orden Energía Volumen
(kcal) (ml/día) Complicaciones
1 100 ml glucosa 5 % cada 4 h. 120 600
2 100 ml fórmula isotónica c/4 h. 600 600
1. Gastrointestinales:
3 150 ml fórmula isotónica c/4 h. 900 900 • Diarreas.
4 210 ml fórmula isotónica c/4 h. 1 200 1 200 • Náuseas y vómitos.
5 250 ml fórmula isotónica c/4 h. 1 500 1 500 • Cólicos.
6 300 ml fórmula isotónica c/4 h. 1 800 1 800 • Constipación.
7 400 ml fórmula isotónica c/4 h. 2 400 2 400
8 400 ml fórmula isotónica c/4 h. 2 400 2 400 2. Mecánicas:
9 480 ml fórmula isotónica • Molestias nasofaríngeas.
5 veces/día. 2 400 2 400 • Absceso del septum nasal.
• Sinusitis.
La manipulación de los nutrientes debe ser la mí- • Erosiones y necrosis nasales.
nima posible, en condiciones de asepsia y antisep- • Otitis media.
sia. Hay que tener presente que la temperatura del • Ulceraciones faríngeas.
local debe ser igual o inferior a los 21ºC para evitar • Esofagitis.
la contaminación y la descomposición de los nu- • Estenosis esofágica.
trientes. • Fístula traqueoesofágica.
• Colocación incorrecta de la sonda (bronquial).
Factores que influyen • Broncoaspiración.
en el vaciamiento gástrico • Otras.
1. Mecánicos: 3. Metabólicas:
• Posición corporal. • Deshidratación hipertónica.
• Distensión gástrica. • Hiperosmolaridad.
2. Relacionados con la dieta: • Coma hiperosmolar no cetósico.
• Consistencia. • Hiperhidratación.
• Temperatura. • Diselectrolitemias.
• Densidad energética. 4. Infecciosas:
• Osmolaridad. • Sepsis respiratoria posbroncoaspiración.
• Acidez gástrica. • Colonización traqueal.
• Concentracion de grasas. • Contaminación.
• Concentración de aminoácidos. • Peritonitis.
86
5. Psicológicas, se deben a: Monitorización de la nutrición enteral
• La simple incapacidad de comer.
• Deprivación del gusto y la masticación. 1. Hemogasometría al inicio y luego según la
• Incomodidad de llevar una sonda permanente. evo- lución.
• Limitaciones de movilidad. 2. Glicemia diaria al inicio. Luego semanalmente.
• Apetito insatisfecho para ciertas comidas. 3. Electrólitos en sangre y orina a criterio médico.
4. Pruebas de función hepática cada semana, lue-
La diarrea es una de las más frecuentes complica- go a criterio médico.
ciones de la NE. En ocasiones llega a impedir un 5. Hemograma, igual al anterior.
adecuado aporte de nutrientes, pero se ha visto que 6. Urea o creatinina en sangre y en orina si se va
la mayoría de los casos se resuelven con sólo dimi- a realizar balance nitrogenado.
nuir la hipertonicidad, el volumen y la velocidad de
administración. Finalmente, se deben resaltar las ventajas de
La contaminación es poco frecuente, pero hay que la NE:
tenerla presente. 1. Es más fisiológica.
Existen otras causas de diarrea que se relacionan 2. Es de más fácil manejo.
con las enfermedades subyacentes, como:
3. Menos costosa.
1. Isquemia intestinal.
4. Menos complicaciones.
2. Hipofuncion intestinal:
5. Requiere menos medios técnicos.
• Bajo gasto cardíaco.
• Fármacos utilizados. 6. Requiere menos personal.
3. Obstrucción intestinal. 7. Más fácil de preparar y administrar.
4. Desnutrición severa. 8. Mejor utilización de los nutrientes al seguir
5. Malabsorción: la vía entero-hepática.
• Enfermedades de la mucosa digestiva. 9. Se favorece la inmunocompetencia.
• Alteraciones de la secreción biliar. 10. Evita la translocación bacteriana.
• Alteraciones de la secreción pancreática. 11. Favorece el tránsito a la alimentación oral.
87
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88
Segunda Parte

ENFERMEDADES DEL RIÑÓN


7
RECUENTO
ANATOMOFISIOLÓGIC
O DEL RIÑÓN
yuxtamedulares, se lámina densa, y, por
continúan con los último, una capa inter-
vasos rectos falsos o na electronolúcida, que
Antes de estudiar las espúreos, que cir- Corpúsculo de Malpighi se conoce como lámina
enfermedades del riñón culan entre los tubos Está formado por un rala interna.
es menester revisar colectores y las asas ovillo capilar engarzado La pared del capilar
algunos aspectos de Henle. en el sistema tubular en glomerular funciona
importantes de la Las venas siguen el una estructura como un filtro, que
anatomía y fisiología de trayecto de las arterias denominada cáp- sula permite el paso de
este órgano. Se obviarán y se denominan igual de Bowman. Cuando pequeñas molécu- las,
las descripciones que estas, hasta llegar a se analiza el glomérulo pero restringe casi por
macroscópicas que el la vena renal principal, utilizando el completo el de
estudiante podrá tributaria de la vena microscopio sustancias del tamaño
encontrar en cualquier cava. electrónico, se ponen de la albúmina o
texto de Anatomía y se en evidencia tres tipos mayores. Para que una
hará referencia a la La nefrona diferentes de células. molécula atraviese la
circulación intrarrenal y Está constituida por el pared capilar, debe
a la unidad funcional del corpúsculo de Malpighi, 1. Células epiteliales pasar el endotelio
riñón, la nefrona. el túbulo contorneado de la cápsula de fenestrado, la MBG y el
Bowman, que se epitelio; el prime- ro,
Circulación proximal, el asa de Henle,
unen para formar con
el túbulo contorneado sus cargas
intrarrenal dos vertientes, la negativas en su
distal y el tubo
Los vasos renales colector. Además, se pa- rietal y la superficie impide el
principales se dividen considerará como visceral. tránsito de los
antes de entrar al riñón estructura asociada y 2. Células endoteliales elementos formes de la
y dan lugar a las arterias que originan el capilar. sangre y probablemente
en íntima relación
segmenta- rias, que una 3. Células desempeña un papel
funcional, al aparato intercapilares o células
vez cerca del órgano yuxtaglomerular. fundamental en la
mesangiales.
originan las arte- rias llegada de proteínas a la
interlobares, que En el interior del MBG; a pesar de esto se
penetran en las corpúsculo de Malpighi, conoce que esta última
columnas renales y la ori- na y la sangre es la estructura
discurren entre las están separadas por una determinante
pirámides adyacentes. capa de célu- las
Junto a la unión endoteliales situadas 91
corticomedular se unas de otras a una
originan las arterias distancia de 0,06 m,
arciformes, de las que a por la membrana
su vez nacen las basal glomerular
interlobulares, que se (MBG) y por las células
dirigen hacia la cápsula epiteliales de la hoja
renal y forman el plexo visceral de la cápsula
capsular; pero antes de Bowman, que se
emergen, a nivel de la denominan podocitos
corteza, las porque emiten unos
intralobulares, que se seudópodos llamados
conti- núan con las pedicelos que se adosan
arterias aferentes a la membrana basal.
glomerulares. Estas Cuando se estudia la
arteriolas aferentes se membrana basal con el
dividen para formar el mi- croscopio
ovillo glomerular, que electrónico, se precisan
posteriormente origina tres capas: una externa,
las arteriolas que deja pasar bien el
eferentes. haz de electrones y por
Si los glomérulos eso se llama lámina
son corticales, las rala externa; una
arteriolas eferentes media, que no permite
siguen con la red bien el paso de los
capilar peritubular; si, electrones deno- minada
por el contrario, son
de las propiedades de permeabilidad del glomérulo, descendente del asa. Se ha tratado de encontrar di-
por su composición química y su estructura. ferencias entre los segmentos delgados de las
Mesangio. Al igual que el mesenterio cubre las nefro- nas corticales y los de las nefronas
asas intestinales, los capilares glomerulares están yuxtamedulares, pero esto no ha sido posible.
unidos entre sí por una sustancia denominada me- Rama ascendente. El epitelio de este segmento
sangial, que es producida por las células mesangiales grueso está constituido por células más anchas y
o intercapilares, al conjunto de las cuales se deno- más altas, que tienen además abundantes mitocon-
mina mesangio. Además de crear la sustancia me- drias que tienden a apelotonarse, así como micro-
sangial, a estas células se atribuye la producción de vesículas.
prostaglandinas y un gran poder fagocítico. Las diferentes características estructurales del
asa de Henle deben guardar relación con las
distintas funciones atribuibles a ella; sin embargo,
Túbulo contorneado proximal
Las células del túbulo contorneado proximal son de la activi- dad funcional del asa en su totalidad está
relaciona- da con su participación junto a otras
tipo cúbico o ligeramente columnar, están unidas por
estructuras en el mecanismo de la contracorriente.
interdigitaciones citoplasmáticas y presentan en su
borde luminal unas microvellosidades denominadas
Túbulo contorneado distal
ribete en cepillo. La función del ribete en cepillo es
Las células que revisten el túbulo contornado distal
aumentar la superficie de absorción, distribuir el fil- son un poco menos altas que las de la rama ascen-
trado en capas finas y ayudar a éste a reabsorberse dente del asa de Henle. Algunas presentan
con más facilidad. En el citoplasma de las células, microve- sículas y microvellosidades, mientras
muy rico en ribonucleoproteínas que guardan rela- que otras no las tienen. Existe un número
ción con el gran trabajo que realizan, se evidencia considerable de mito- condrias en el citoplasma de
una gran cantidad de mitocondrias. estas células, aunque son más pequeñas que en el
En ocasiones llegan a la luz tubular sustancias que resto de las células de las nefronas.
por su tamaño o estructura química no pueden ser En la parte donde el túbulo contorneado distal
reabsorbidas, por lo que son captadas a través de entra en la corteza y se adosa al polo vascular del
pequeños orificios, verdaderas invaginaciones que glomérulo, las células se estrechan y sus núcleos se
posteriormente originan vesículas. A este mecanis- apelotonan y dan origen a la región conocida como
mo se denomina pinocitosis y se le acepta para ex- mácula densa, que forma parte del aparato yuxta-
plicar el transporte de algunos antibióticos, como glomerular. La función del túbulo contorneado
los aminoglucósidos. distal es hacer isotónica la orina, gracias al
intercambio catiónico que se produce como
Asa de Henle mecanismo de for- mación de agua libre.
En ella se distinguen tres segmentos: la rama des-
cendente, el segmento delgado o asa propiamente Tubo colector
dicha y el segmento grueso o rama ascendente. Está unido al túbulo contorneado distal por un pe-
Rama descendente. El epitelio que reviste este queño conducto llamado tubo colector cortical, que
segmento está constituido por células parecidas a las se encuentra constituido por dos tipos de células:
del túbulo proximal, aunque más pequeñas y con las claras y las oscuras o intercaladas. La función
menos mitocondrias y ribonucleoproteínas. El ribe- de ambos tipos celulares no está del todo aclarada.
te en cepillo está presente, pero es más pequeño, lo El tubo colector comienza en la parte interna de la
que quizás guarde relación con una actividad cor- teza y desciende hasta la papila, donde al
reabsortiva menor. confluir con los tubos correspondientes a las
Asa de Henle propiamente dicha. Es mucho más demás nefro- nas, da origen a los conductos
larga en las nefronas yuxtamedulares que en las papilares.
corticales, y tiene un epitelio de tipo escamoso apla- El epitelio de los tubos colectores es de tipo cu-
nado con menor cantidad de mitocondrias, ribonu- boidal, con citoplasma claro y escasas
cleoproteínas y digitaciones que las que se aprecian mitocondrias. Se le supone función de
en el túbulo contorneado proximal y en el segmento revestimiento, pues aunque el tubo colector forma
parte del sistema de contra- corriente, sus células
tienen una función pasiva.
92
Aparato yuxtaglomerular endotubular, de manera que las altas concentracio-
Este aparato está constituido por la arteriola aferente, nes de este catión en la luz del túbulo provocan la
la arteriola eferente y la mácula densa (Fig. 7.1). liberación de renina.
Igualmente, las concentraciones plasmáticas de
Mácula
Arteriola Gránulos Túbulo contorneado densa Arteriola sodio y potasio, la ADH, las prostaglandinas, la an-
aferente distal eferente
giotensina II, la adenosina y el óxido nítrico, esti-
mulan la actividad del aparato; estudios recientes
demuestran que este último es el principal contribu-
yente en la actividad biológica del factor relajante

Células epiteliales
Agrupación derivado del endotelio y, por tanto, desempeña un
celular
yuxtaglomerulares
Mesangio
importante papel en el control de la hemodinámica
glomerular y en la liberación de renina en varias
con- diciones fisiológicas y patológicas.

Glomérulo
Fisiología renal
Fig. 7.1. Diagrama del aparato yuxtaglomerular.
Flujo sanguíneo renal
La arteriola aferente presenta, muy cerca del polo Se denomina flujo sanguíneo renal a la cantidad de
vascular del glomérulo, unas células cargadas de sangre que pasa por los riñones en un minuto. De
gránulos, que no son más que células musculares este flujo, que es de 1 200 ml/min, el 90 % circula
lisas especializadas en la síntesis y liberación de re- por la corteza renal y el 10 %, por la médula. En
nina. condiciones de hipovolemia, el flujo sanguíneo
La participación de la arteriola eferente en el fun- medular aumenta considerablemente.
cionamiento del aparato yuxtaglomerular, ha sido La determinación del flujo sanguíneo renal pue-
puesta en duda por algunos autores, y la función a de realizarse por varios métodos, pero el más acu-
ella asignada se ha transferido a una agrupación ce- cioso y fácil es el de la cámara gamma utilizando
lular que se encuentra en el espacio triangular deli- xenón radiactivo.
mitado por las arteriolas aferente y eferente y la
mácula densa.
Flujo plasmático renal
La mácula densa, estructura ya estudiada en el Se denomina flujo plasmático renal a la cantidad de
túbulo contorneado distal, constituye un elemento
plasma que pasa por los riñones en un minuto, y su
más en el funcionamiento del aparato yuxtaglo-
valor es de 600 a 650 ml/min. En clínica este flujo
merular.
se determina utilizando la depuración o aclaramien-
La isquemia renal estimula al aparato yuxtaglo-
to del paraaminohipurato de sodio, pues el ácido
merular, el cual responde liberando renina, enzima
que actúa sobre un polipéptido de producción hepá- paraaminohipúrico tiene la característica de elimi-
tica, el angiotensinógeno, y lo convierte en un deca- narse totalmente en una sola pasada por el riñón
péptido aún no activo: la angiotensina I. Ésta, a su por filtración glomerular y excreción tubular. Se
vez, sufre la acción de las convertasas presentes en entien- de por depuración o aclaramiento
el pulmón y riñón, y se transforma en angiotensi- plasmático, la can- tidad de plasma que se depura
na II, la cual produce una vasoconstricción intensa de una sustancia cualquiera en un minuto.
de las arteriolas y aumenta considerablemente la re-
Utilizando el principio de Fick como base y des-
sistencia periférica; además, por acción enzimática
pués de modificaciones matemáticas, se llegó a lo
se convierte en angiotensina III. Ésta actúa sobre la
capa glomerulosa de la corteza suprarrenal y esti- que se conoce como fórmula general para los
mula la síntesis y liberación de aldosterona. aclaramientos: O.v
Otros estímulos hacen entrar en función al apara- Cs = P
to yuxtaglomerular; así, la mácula densa es un de- donde:
tector muy sensible del contenido de sodio Cs = aclaramiento de la sustancia en cuestión.

93
O = concentración urinaria de la sustancia (en mg %). Para simplificar la estimación del FG, los
v = volumen de orina (en ml/min). investi- gadores han empleado otros métodos de
P = concentración plasmática de la sustancia (en aclaramien- to, con bolos de inyección y
mg %). marcadores de filtración alternativos, como son los
El conocimiento de esta fórmula es esencial para compuestos de bajo peso molecular quelados por
estudiar y comprender las funciones renales. radioisótopos.
Los dos más usados son:
Filtrado glomerular
Es la cantidad de flujo plasmático renal que se filtra [I125] iotalamato y [Tc99m] DTPA
libremente por los glomérulos en un minuto. En el Otros incluyen Cr51 – EDTA
proceso de filtración glomerular intervienen las fuer- [I131] diatrizoato
zas siguientes: [I131] iotalamato
PH = presión hidrostática capilar. y el Iohexal, un medio de contraste radiológico que
KF = coeficiente de filtración para una membrana. puede ser analizado utilizando técnicas de fluores-
PO = presión oncótica. cencia.
PIC = presión intracapsular (cápsula de Bowman). Para medir la tasa de filtración glomerular se
EGD = equilibrio de Gibbs–Donnan. apli- ca la fórmula general de los aclaramientos:
En individuos sanos KF no varía, ya que depende
de las características de la membrana, del diámetro O creatinina . v
de los poros, etc. El equilibrio de Gibbs-Donnan in- FG = P creatinina
fluye en la calidad del filtrado, es decir, en la cuan-
tía de un tipo electrolítico en relación con otro, pero Mecanismo de autorregulación
no en la cantidad de éste. A pesar de las variaciones importantes que tiene el
Teniendo en cuenta las consideraciones anterio- flujo sanguíneo renal, el FG se mantiene constante
res, en un individuo sano la presión de filtración mientras la presión en la arteria renal principal no
depende de la presión hidrostática capilar (60 mmHg) caiga por debajo de 80 mmHg. Esta estabilidad se
menos la suma de la presión oncótica (25 mmHg) mantiene gracias a los denominados mecanismos
más la presión intracapsular (20 mmHg), o sea: de autorregulación renal.
PF = PH - ( PO + PIC) Se han postulado diferentes teorías para explicar
En las personas sanas, la tasa de filtración glo- estos complejos mecanismos. Éstas son:
merular (FG) es alrededor de 125 ml/min/1,73 m2 o 1. Teoría de la viscosidad.
180 L/día/1,73 m2. El valor de 1,73 m2 refleja el 2. Teoría de la separación celular.
valor promedio para hombres y mujeres jóvenes. A 3. Teoría metabólica.
pesar del ajuste para el área de superficie corporal, 4. Teoría de la presión del flujo intersticial.
el FG para mujeres es aproximadamente un 8 % más 5. Teoría miogénica.
bajo que para hombres. El FG disminuye con la edad; De todas las teorías mencionadas, la miogénica
en los hombres, la caída está alrededor de 10 ml/ parece tener más defensores y en ella es posible
min/1,73 m2 por cada década después de los 40 años. que el aparato yuxtaglomerular tenga una función
El valor del adulto normal se obtiene después de im- portante.
los 2 años de edad.
La medición del caudal de FG se realiza por dife- Funciones del riñón
rentes métodos. Es preciso que la sustancia que se
El riñón tiene las funciones siguientes:
utilice como marcador para medir el FG se filtre li-
1. Control de la homeostasis.
bremente y no se excrete ni se reabsorba por los
2. Control de la presión arterial.
túbulos. La inulina —un polisacárido— cumple es-
3. Eliminación de las sustancias de desecho.
tos requisitos, pero su dosificación resulta muy en-
4. Síntesis de eritropoyetina.
gorrosa. La creatinina de producción endógena
(metabolismo muscular), con algunas limitaciones, 5. Regulación del metabolismo fosfocálcico.
resulta también un buen marcador para la dosifica-
ción del FG y es de todos el más utilizado. En los capítulos sobre “Equilibrio hidromineral”
e “Hipertensión arterial”, respectivamente, se tratan
94
los mecanismos de los que se vale el riñón para a) De comienzo agudo.
efec- tuar el control de la homeostasis y su función • Glomerulonefritis aguda posestrepto-
en el control de la presión arterial. cócica.
• Glomerulonefritis rápidamente progre-
Eliminación de las sustancias de desecho siva idiopática.
La orina inicial, ultrafiltrado del plasma que cae en • Síndrome de Goodpasture.
el espacio de Bowman, sufre una serie de modifica- b) De comienzo insidioso.
ciones (el lector puede encontrar este proceso deta- • Glomerulonefritis por daño mínimo.
llado en el capítulo sobre “Equilibrio hidromineral”) • Glomerulopatía membranosa.
hasta convertirse en la orina final que, llevando to- • Glomerulonefritis proliferativa de co-
das las sustancias de desecho del metabolismo que mienzo insidioso.
se le han añadido a su paso por el túbulo renal, aban- • Glomerulonefritis membranoprolife-
dona el riñón por los conductos papilares y cae en la rativa.
pelvis renal. De ahí en adelante la orina no sufrirá • Glomerulosclerosis focal.
modificaciones. • Glomerulopatía por depósito de IgA.
2. Secundarias.
Síntesis de eritropoyetina c) Diabetes mellitus.
Esta función la cumple el riñón secretando eritropo- d) Lupus eritematoso diseminado.
yetina, hormona que ejerce su acción sobre la mé- e) Amiloidosis.
dula ósea, lo cual favorece la eritropoyesis. No se f) Angeítis.
ha podido precisar con exactitud el lugar donde di- g) Síndrome de Shönlein-Henoch.
cha hormona se secreta ni se ha logrado sintetizar h) Hiperantigenemia B.
químicamente. Algunos trabajos señalan que existen i) Drepanocitemia.
centros extrarrenales productores de eritropoyetina j) Linfomas.
que podrían actuar en individuos nefrectomizados; B. Congénitas.
estos centros tampoco han podido determinarse. 1. Síndrome de Alport.
2. Síndrome uña-rótula.
3. Síndrome nefrótico congénito.
Regulación del metabolismo fosfocálcico
Está totalmente demostrado que en el parénquima
II. Enfermedades tubulares.
renal se activa la vitamina D y se convierte en 1-25
A. Tubulopatías congénitas.
dihidrocolecalciferol, y aunque el sitio exacto no se
1. Diabetes renales.
ha podido precisar, todo parece indicar que la mé-
a) Diabetes glucosúrica renal.
dula renal es la que realiza esta función.
b) Diabetes fosfática familiar.
El 1-25 dihidrocolecalciferol actúa en el intestino c) Aminoacidurias familiares.
y los huesos. En el intestino aumenta la síntesis de d) Síndrome de Fanconi.
la proteína transportadora de calcio presente en las e) Acidosis tubular renal.
células intestinales que, como su nombre indica, lleva f) Diabetes insípida nefrógena.
el calcio de la luz intestinal a través de la célula ha- 2. Enfermedades quísticas del riñón.
cia el espacio intersticial. En los huesos provoca au- a) Riñón poliquístico (infantil y adulto).
mento de los gránulos de calcio presentes en el b) Nefronoptisis.
citoplasma de los osteoblastos, con lo que facilita la B.Tubulopatías adquiridas.
mineralización ósea. 1. Nefrosis grasa.
2. Nefropatía caliopénica.
Clasificación de las enfermedades 3. Nefritis perdedora de sal.
del riñón 4. Necrosis tubular aguda.
I. Enfermedades glomerulares. III. Enfermedades intersticiales.
A. Adquiridas. A. Pielonefritis aguda.
1. Primarias.
95
B. Pielonefritis crónica. 1. Nefroangiosclerosis benigna primaria (hiper-
C. Nefritis intersticial aguda. tensión arterial).
1. Bacteriana (pielonefritis aguda). 2. Nefroangiosclerosis maligna.
2. No bacteriana (inmunológica). a) Primaria (hipertensión arterial).
D. Nefritis intersticial crónica. b) Secundaria (nefropatía).
1. Bacteriana (pielonefritis crónica). 3. Necrosis cortical bilateral (shock hemorrá-
2. No bacteriana. gico).
a) Nefritis por radiación.
4. Poliarteritis nudosa (lesión fundamental en
b) Nefropatía por hipercalcemia.
las arterias arciformes).
c) Nefropatía por ácido úrico.
d) Nefropatía por abuso de analgésicos. B. Extrarrenales.
e) Nefropatía de los balkanes. 1. Obstrucción total de la arterial renal (infarto
f) Riñón senil. del riñón).
2. Obstrucción parcial de la arteria renal (hi-
IV. Enfermedades vasculares. pertensión renovascular)
A. Intrarrenales.
96
8

ENFERMEDADES GLOMERULARES
Bajo el nombre de glomerulopatías se agrupa una ción expuesta en el capítulo anterior, pues toma en
variedad de enfermedades del riñón que lesionan consideración ambos aspectos.
fundamentalmente al corpúsculo de Malpighi y que Las glomerulopatías pueden ser congénitas y ad-
se expresan en la práctica diaria por proteinuria, quiridas. En el momento actual se reconocen tres
hematuria y, en muchas oportunidades, por edema e glomerulopatías congénitas: el síndrome de Alport,
hipertensión arterial. que además de los síntomas propios de las nefritis
La magnitud del cuadro clínico varía de acuerdo intersticiales, presenta sordera de causa neurológi-
con el tipo de enfermedad que se trate. Así, en la ca, lesión del órgano de Corti, cataratas, esferofaquia
glomerulonefritis aguda posestreptocócica aparecen y otras alteraciones del segmento anterior del ojo,
todos los síntomas, pero predominan la hematuria y con un patrón de trasmisión hereditaria autosómico
la hipertensión arterial, mientras que en la glomeru- dominante; el síndrome uña-rótula, que se presenta
lopatía por daño mínimo los edemas dominan el en pacientes sin uñas, con ausencia o displasia de la
cuadro junto con una marcada proteinuria, hasta lle- rótula, y que tienen un patrón de trasmisión heredi-
gar a constituir un síndrome nefrótico. taria autosómico recesivo; y el síndrome nefrótico
Las enfermedades glomerulares constituyen la congénito, que no es más que la aparición de éste
causa más frecuente de insuficiencia renal crónica durante el primer año de vida y por lo común tiene
en los adultos jóvenes, por lo cual su estudio resulta múltiples patrones histológicos. Las glomerulopa-
imprescindible. tías adquiridas pueden ser el resultado de lesiones re-
Desde los trabajos de Richard Bright hasta los nales que surgen en el curso de enfermedades que
estudios de Dixon, la patogenia de las glomerulo- afectan a otros órganos y se denominan glo-
patías ha sido muy discutida. Esto se debe a que se merulopatías secundarias, o presentarse como una
han querido considerar afecciones tan disímiles enfermedad renal per se y se llama entonces
como la glomerulonefritis postreptocócica y el daño glo- merulopatía primaria.
glomerular mínimo como si se tratara de una misma Hasta hace algunas décadas se consideraba que
enfermedad. Es por ello necesario tener en cuenta todas las glomerulopatías tenían un comienzo agu-
la patogenia de cada una de las glomerulopatías por do, a partir del cual se producían las distintas
separado. posibi- lidades evolutivas que más adelante se
La introducción de la biopsia renal percutánea y describirán. Fueron Longcope y Ellis los primeros
el desarrollo de la microscopia electrónica y de las en llamar la atención sobre la probable existencia
técnicas de tinción con inmunofluorescencia, han de dos tipos diferentes de nefritis. Uno de estos
permitido estudiar de forma exhaustiva las glomeru- tipos, al cual Longcope denominó A y Ellis tipo I,
lopatías. Utilizando estos recursos de la tecnología está caracteri- zado por un comienzo brusco con los
moderna se han realizado múltiples clasificaciones, elementos del síndrome nefrítico agudo, es decir,
algunas sobre bases puramente histológicas que, edema, hiperten- sión arterial, hematuria y
aunque son muy útiles en manos del patólogo y del proteinuria; suele tener, además, una evolución
nefrólogo, resultan extenuantes y de difícil manejo favorable. El otro grupo de nefritis, llamado tipo B
para el estudiante y el médico práctico; por otro lado, por Longcope o II por Ellis, comienza de forma
las clasificaciones exclusivamente clínicas resultan lenta, insidiosa, sin que puedan precisarse los
insuficientes. Por todo esto se escogió la clasifica- elementos del síndrome nefrítico; ade- más, por lo
general tiene una evolución tórpida,

97
donde el síndrome nefrótico domina el cuadro clíni- Etiopatogenia
co, y en algunas oportunidades comienza con los En el siglo XIX Richard Brigth fue el primero en ob-
signos y síntomas de la insuficiencia renal crónica.
servar la relación entre la escarlatina y la nefritis
En la actualidad, las glomerulopatías primarias
aguda. G. F. Dick y G. H. Dick demostraron que la
clasifican en dos grandes grupos: las de comienzo
escarlatina era producida por un estreptococo y,
agudo, que incluyen, además de la glomerulonefri-
pos- teriormente, Longcope evidenció la gran
tis aguda posestreptocócica —enfermedad modelo
frecuencia con que una infección estreptocócica
de este grupo—, la glomerulonefritis rápidamente
progresiva idiopática y el síndrome de Goodpastu- precedía a las nefritis agudas. Esto dejaba bien
re, ya que aunque no evolucionan igual, sí tienen establecido que entre los estreptococos y la nefritis
como característica común los signos y síntomas del aguda tenía que existir alguna relación.
síndrome nefrítico agudo; y las de comienzo insi- Las observaciones de Shick acerca del período
dioso, que salvo la glomerulopatía por depósito de latente entre la afección inicial y el comienzo de la
IgA, cursan de manera frecuente con el cuadro clí- glomerulonefritis, y la demostración posterior de que
nico del síndrome nefrótico, motivo por el cual las la sangre y la orina de los pacientes con nefritis
estudiaremos en conjunto. eran estériles, condujeron a la idea de que la
Las glomerulopatías secundarias a la diabetes glomerulo- nefritis era causada por una reacción de
mellitus, al lupus eritematoso diseminado y a la hipersensi- bilidad, al parecer desencadenada
amiloidosis, se incluyen también en el epígrafe “Sín- por el agente infeccioso.
drome nefrótico”, ya que usualmente cursan con ese En la era preantibiótica se detectaba el estrepto-
cuadro. Las otras glomerulopatías secundarias se coco en la orofaringe de la inmensa mayoría de los
pacientes que sufrían una glomerulonefritis; sin
estudian en el capítulo correspondiente a las enfer-
embargo, había discordancia entre la incidencia de
medades que las originan.
infecciones estreptocócicas y la de glomerulonefritis.
Así, en algunas epidemias se producían hasta
un 20 % de casos con nefritis aguda, mientras que
GLOMERULOPATÍAS en otras no había prácticamente ninguno. Fue Ram-
melkamp quien clasificó los estreptococos betahe-
DE COMIENZO AGUDO molíticos del grupo A basándose en el carácter
antigénico de la proteína M, que es un antígeno in-
En este grupo se encuentran las glomerulonefritis tracelular relacionado con la virulencia de los es-
agudas posinfecciosas, la glomerulonefritis rápida- treptococos y su carácter nefritógeno.
mente progresiva idiopática y el síndrome de Goodpas- En la actualidad se conoce que sólo ciertos tipos
ture. serológicos de estreptococos, conocidos como fac-
tores nefritógenos, se asocian con glomerulonefri-
Glomerulonefritis aguda tis. Así, los factores nefritógenos asociados con
infecciones faríngeas incluyen proteína M tipos 1,
posestreptocócica 3, 4, 6, 12, 25 y 49; y con infecciones de la piel los
tipos 2, 49, 55, 57 y 60. El serotipo 49 es el factor
común que se asocia a la GNAPE.
Concepto
La presencia del estreptococo despierta un com-
La glomerulonefritis aguda posestreptocócica plejo mecanismo inmunológico. Hasta el momento
(GNAPE) es una afección inflamatoria aguda de se han señalado varios antígenos estreptocócicos
causa inmunológica, que afecta de manera difusa los que parecen ser los responsables de la lesión renal,
glomérulos, guarda relación con una infección es- entre los que se destacan la proteína M, sola o
treptocócica previa y se manifiesta clínicamente por unida al fibrinógeno y la endoestreptocina. Sin
hematuria, hipertensión arterial, edemas, proteinu- embargo, la naturaleza exacta de los antígenos
ria y oliguria. Se presenta con mayor frecuencia en nefritógenos se desconoce todavía. Sea cual fuere
niños y adultos jóvenes, pero puede aparecer a cual- el antígeno es- treptocócico, éste despierta la
quier edad. respuesta inmune de tipo anticorpal y se producen
anticuerpos del tipo
98
de la inmunoglobulina G (IgG). Esta IgG pudiera rénquima renal sobresale y existe delimitación neta
encontrar el antígeno en la circulación y formar entre la corteza y la médula.
inmunocomplejos solubles (no precipitinas) que
quedarían atrapados en la red capilar glomerular, Aspecto microscópico
o podría suceder que el antígeno se adosara a la Los hallazgos histológicos dependen del tiempo de
pared del capilar glomerular y formara inmuno- evolución de la enfermedad. Si el espécimen
complejos in situ. De cualquier manera que esto biópsico se toma en las primeras 2 semanas y se
suceda, existen evidencias de que una vez en el observa en el microscopio de luz, se encontrarán:
glomérulo, se produce activación del complemento glomérulos aumentados de tamaño que rellenan los
por la vía clásica (C1q), activación del sistema espacios de Bowman, muy hipercelulares; las
quinina-calicreína, atracción y activación de ma- paredes capilares están engrosadas difusamente y
crófagos con la consecuente liberación de las luces reducidas, y en los casos más severos a
linfoquinas, sobre todo del FNT, expresión de mo- veces están ocluidas; además, se pueden ver focos
léculas de adhesión tipo ICAM-1 o VCAM-1 y ac- de necrosis y presencia de semilunas epiteliales. La
tivac ión de la cascada de la coagulación. existencia de polinuclea- res en el glomérulo es un
Posteriormente, con la llegada y adhesión de po-
signo histológico de esta enfermedad. Los túbulos
linucleares junto a otros mediadores de la infla-
e intersticio por lo general no están afectados,
mación, se producirá el daño estructural de la
aunque en ocasiones se encuen- tran hematíes
membrana basal glomerular, que originará todos
dentro de la luz tubular.
los eventos clínicos de la GNAPE.
En la microscopia electrónica se detectan depósi-
Otros plantean la posibilidad de que la neurami-
tos intramembranoepiteliales en forma de gibas
nidasa estreptocócica elimine el ácido siálico de la
(humps), que no son más que complejos inmunes
IgG y produzca alteraciones estructurales en ésta,
adosados a dicha membrana. La inmunofluorescen-
con la consiguiente formación de inmunocomplejos
cia demuestra depósitos granulares de C3 e IgG en
constituidos por IgG alterada y anticuerpos anti-IgG las paredes de los capilares y en el mesangio.
alterada. Otra hipótesis se basa en que los Si la biopsia se realiza después de la segunda se-
lipopolisacáridos del estreptococo crean activación mana de iniciada la enfermedad, no se hallarán
policlonal de los linfocitos B y del complemento por poli- nucleares ni gibas. La proliferación se va
la vía alternativa. haciendo cada vez más discreta y a veces se
Sea cual fuere el mecanismo patogénico, la mantiene por mu- cho tiempo (1 a 10 años).
GNAPE deja inmunidad para todos los tipos nefri-
tógenos que resulta bastante duradera, por lo que la Cuadro clínico
posibilidad de un segundo ataque es infrecuente. Desde el punto de vista epidemiológico, la GNAPE
En resumen, se puede considerar que la GNAPE es una enfermedad de los niños y adultos jóvenes,
es una enfermedad inmunológica causada por com- ocurre más a menudo entre los 5 y 15 años de edad
plejos inmunes que lesionan el glomérulo, y cual- y es rara antes de los 2 años y después de los 40,
quiera que sea el mecanismo patogénico se produce aunque puede aparecer a cualquier edad. Se reporta
un consumo de complemento que se utiliza como una preponderancia de 2:1 en los varones.
criterio evolutivo. La GNAPE se presenta durante brotes epidémi-
cos o de forma esporádica. Las formas epidémicas
Anatomía patológica ocurren más a menudo en países con sistemas de
Aspecto macroscópico salud pobremente desarrollados. Las epidemias con-
Los riñones pueden tener aspecto normal o estar algo secutivas a infecciones de la piel son comunes en
aumentados de volumen. En ocasiones pesan has- países con clima tropical y aparecen durante el ve-
ta 180 g cada uno. La superficie externa es lisa y sin rano (Trinidad y Tobago, Maracaibo). Por el con-
cicatrices, y presenta a veces petequias puntiformes trario, las consecutivas a faringoamigdalitis son
que se deben a la ruptura, por inflamación, de capi- frecuentes en regiones con clima templado y se
lares glomerulares. En la superficie de corte el pa- pre- sentan durante épocas de frío.
La aparición de la glomerulonefritis es
usualmente súbita, siempre precedida, entre 1 y 4
semanas, por
99
una infección estreptocócica faríngea o de la piel. veces es fugaz y transitoria, por lo cual pasa inad-
El período de latencia es de 7 a 14 días después de vertida. Con mucha frecuencia las cifras de tensión
la faringoamigdalitis y de 14 a 28 días después de la arterial diastólica no sobrepasan de 110 mmHg. La
piodermitis. Por lo general el paciente nota aumen- encefalopatía hipertensiva con cefalea, alteraciones
to de volumen de la cara y de los miembros inferio- visuales y toma del sensorio es infrecuente.
res, al mismo tiempo que sus orinas se tornan escasas Oliguria. También se observa en casi todos los
y de color oscuro. Al examinarlo se comprueban los casos, aunque en la mayoría es imperceptible. Sólo
edemas y la hipertensión arterial. Muchas veces el se verifica en los pacientes hospitalizados, a los
enfermo se queja de cefalea, astenia, anorexia, náu- cua- les se mide a diario el volumen urinario. La
seas, vómitos, dolor abdominal y malestar general.
anuria es infrecuente y, si aparece, sugiere la forma
La fiebre es excepcional.
rápida- mente progresiva.
No siempre el cuadro clínico se presenta comple-
to y más de una vez un solo síntoma, como por ejem-
Exámenes complementarios
plo la hematuria o el edema, domina la escena. En
ocasiones las manifestaciones clínicas son tan leves Análisis de orina. La hematuria se observa en todos
y transitorias, que prácticamente pasan inadvertidas. los pacientes y puede ser macroscópica o microscó-
Durante las epidemias de GNAPE, la incidencia de pica. La mayoría de los eritrocitos encontrados en
casos subclínicos es de 4 a 10 veces mayor que la de el sedimento urinario son dismórficos. Los
los casos clínicos, los cuales sólo se descubren con cilindros eritrocitarios están presentes en la orina
un examen del sedimento urinario. fresca en 60 a 85 % de los enfermos hospitalizados
Hematuria. Constituye el síntoma más importan- y tiene gran significación diagnóstica.
te de esta enfermedad, al extremo que su ausencia La proteinuria es no selectiva y casi siempre
debe hacer dudar seriamente el diagnóstico. La ori- infe- rior a 2 g/día/1,73 m² de superficie corporal
na se vuelve turbia o pardo rojiza, como agua de en la mayoría de los pacientes. Aunque se
lavado de carne. Esta hematuria macroscópica se describe que entre el 10 y el 30 % de los
observa de forma aproximada en el 70 % de los ca- enfermos puede tener una proteinuria de magnitud
sos y por lo regular desaparece en unos pocos días. nefrótica.
En cambio, la hematuria microscópica aparece en El conteo de Addis minutado tiene más valor
todos los pacientes y puede persistir durante meses, como índice pronóstico y de curación, que en la fase
a veces hasta 1 año o más, sin que esto implique un aguda. Función renal. La capacidad funcional del
pronóstico desfavorable como signo aislado. riñón está perturbada en mayor o menor grado
Edema. Es otro síntoma que casi nunca falta y en la GNAPE. Generalmente existe un ascenso
está presente desde el inicio de la enfermedad. Típi- transito- rio de los azoados (urea y creatinina) en el
camente el edema es periorbitario y se hace más
plasma; también la tasa de filtración glomerular
marcado por las mañanas al despertar el enfermo.
suele estar
En algunos casos se generaliza y constituye un ver-
disminuida en la mayoría de los pacientes.
dadero estado de anasarca. La retención de agua y
Hemograma. Es normal o arroja una ligera ane-
sodio con el consiguiente aumento del volumen plas-
mático, produce también congestión pulmonar y dis- mia normocítica normocrómica. Las cifras de leu-
nea, ortopnea, aumento de la presión venosa, ritmo cocitos son normales o puede haber una leve
de galope y edema pulmonar, que sólo cede cuando leucocitosis.
sobreviene la diuresis. En algunos casos se hace el Eritrosedimentación. Está acelerada casi siempre.
diagnóstico incorrecto de enfermedad cardiovascu- Ionograma. Se indicará en caso de oligoanuria
lar primaria si no se tiene un análisis del sedimento para vigilar las concentraciones de potasio
urinario. sérico. Complemento. El complemento
Hipertensión arterial. Generalmente es ligera o hemolítico total y la fracción C3 disminuyen al
moderada y secundaria a la retención hidrosalina. inicio. Sus niveles retornan a la normalidad
Aparece en la mayoría de los casos, pero muchas después de las 6 u 8 semanas. Niveles
persistentemente bajos de complemento hacen
sospechar una glomerulonefritis membrano-
proliferativa o un lupus eritematoso diseminado.
100
Identificación de la infección El episodio clínico agudo es generalmente
autoli- mitado. Las manifestaciones francas como
estreptocócica la hema- turia macroscópica, el edema, la
Métodos indirectos (serológicos) reducción del volumen urinario y la hipertensión
La antiestreptolisina O (ASO) comienza a elevarse arterial, comien- zan a resolverse en la mayoría de
de 10 a 14 días después de la infección. Los antibió- los pacientes den- tro de los primeros 7 a 10 días
ticos administrados a veces la bloquean, y en las in- de evolución de la enfermedad, durante brotes
fecciones de la piel no siempre está elevada. Los epidémicos.
valores normales son hasta 250 U Todd. La hematuria microscópica y la proteinuria des-
La antihialuronidasa y antiADNasa B son más aparecen después de los 6 meses en más del 90 %
específicas, y positivas en el 90 % de los casos. de los casos que surgen durante epidemias. En los
La antiendoestreptosina (derivado del factor ne- es- porádicos puede persistir durante 1 año en el
fritógeno) es positiva por largo tiempo en más 60 % de los pacientes, y por 2 o más años en el 30
del 90 % de los pacientes. %.
Las posibilidades de que el enfermo con GNAPE
Métodos directos muera en la fase aguda son excepcionales.
El exudado faríngeo y el cultivo de las secrecio- La intensidad del cuadro clínico no guarda rela-
nes de las lesiones de la piel resultan indicaciones ción con los resultados finales; así, vemos que
obligadas, aunque no siempre se aísla al estrepto- algu- nos casos alarmantes y severos terminan
coco. en la curación total, mientras que hay formas
ECG. Habitualmente no presenta alteraciones. discretas que pasan a la cronicidad.
Telecardiograma. Es normal o revela discreta Estudios realizados por Rodríguez Iturbe en
cardiomegalia. A veces los hilios están Maracaibo, señalan que alrededor del 70 al 90 % de
ingurgi- los casos que aparecen durante epidemias, evolu-
tados. cionan a la curación después de 20 años; por el
Biopsia renal. No se realiza de manera rutinaria. con- trario, Baldwin plantea que hasta 30 %
Tiene indicaciones precisas en los pacientes que evo- de los pacientes puede evolucionar hacia la
lucionan con un síndrome rápidamente progresivo, cronicidad 20 años después del brote agudo.
en los que no existe evidencia de infección estrepto- Así, el pronóstico a largo plazo de la GNAPE es
cócica previa, en los que aparece proteinuria con ran- más favorable en los casos que aparecen durante
go nefrótico y en aquellos casos que mantengan una epidemia que en los de forma esporádica.
niveles bajos de complemento en forma permanente. También se señala que el pronóstico es mejor en
Diagnóstico los niños que en los adultos, aun durante brotes
Ante un brote epidémico, los elementos del cuadro epidémicos. Tratamiento
clínico y un examen de orina son suficientes para La GNAPE es una afección autolimitada, que no
establecer el diagnóstico. Si se trata de un caso es- tie- ne un tratamiento específico capaz de
porádico, entonces es necesario realizar todos los modificar la evolución natural de la enfermedad,
exámenes complementarios anteriormente señalados sino que des- cansa sobre medidas profilácticas y
y a menudo es preciso descansar el diagnóstico en tratamiento de los síntomas.
el examen histológico de una muestra obtenida por Desde el punto de vista preventivo, no parece
biopsia percutánea. pro- bable que la administración precoz de
penicilina en casos con infecciones estreptocócicas
Evolución establecidas, sea capaz de prevenir la
La GNAPE evoluciona hacia una de las siguientes glomerulonefritis en un pa- ciente determinado,
posibilidades: aunque sí puede evitar la dise- minación del
germen en la comunidad y la producción de
• Curación. nuevos casos. En países desarrolla- dos la
• Glomerulonefritis subaguda. inmunización activa ha conseguido desarro- llar
• Glomerulonefritis crónica. inmunidad protectora a largo plazo contra el
• Muerte en la fase aguda (muy rara). estreptococo betahemolítico nefritógeno. Sin embar-
go, no se ha logrado la erradicación completa de
esta bacteria en la comunidad.
101
En nuestro país, a diferencia de otros del tercer empleará eritromicina o tetraciclina, 1 g diario por
mundo, se cuenta con un programa de atención pri- vía oral.
maria bien organizado y ejecutado por personal al- Hipotensores. Habitualmente la hipertensión ar-
tamente calificado, por lo que las labores preventivas terial es discreta y transitoria, por lo cual no
están encaminadas a la educación sanitaria de la po- necesita tratamiento. Cuando la presión diastólica
blación acerca de la higiene personal y familiar; así es supe- rior a 110 mmHg, se administrarán drogas
como a la detección precoz y la instauración de un vasodila- tadoras del tipo de los inhibidores de los
tratamiento adecuado de posibles infecciones estrep- canales del calcio; también puede utilizarse la
tocócicas orofaríngeas y de la piel. hidralazina. Es- tos vasodilatadores suelen
Hospitalización. Durante los brotes epidémicos combinarse con diuréti- cos. Los inhibidores de la
muchos pacientes con GNAPE, en los que el cuadro enzima convertidora de angiotensina (IECA) y los
clínico inicial es relativamente leve, son ingresados betabloqueadores deben emplearse con cautela en
en sus domicilios, donde el médico de la familia pro- los pacientes con fallo re- nal, porque empeoran la
porcionará la observación y atención necesarias. función renal y producen hipercaliemia.
Deben ser hospitalizados aquellos enfermos con una Diuréticos. Con frecuencia el edema es discreto
disminución moderada o intensa de la función y fugaz, y no es necesario utilizar diuréticos. Si la
renal (depuración de creatinina menor de 60 ml/ función renal está conservada y el edema es mode-
min/1,73 m² o urea sanguínea mayor de 50 mg/dl) rado, puede administrarse uno tiazídico por vía
> (8,22 mmol/L), aquellos con oliguria o anuria, oral. Si existe un edema marcado o
edema marcado o congestión pulmonar significati- manifestaciones de congestión pulmonar, debe
va, hipertensión arterial severa y los casos esporá- emplearse un diurético de asa en dosis elevadas,
dicos. por vía EV.
Reposo. El reposo en cama no tiene efecto bene- Digitálicos. Actualmente se cuestiona su uso en
ficioso demostrado, sin embargo, ha sido tradicio- la GNAPE, ya que no tienen efecto sobre la
nalmente recomendado en la fase inicial de la conges- tión circulatoria que aparece en esta
enfermedad y durante la recurrencia de la hematu- enfermedad. Diálisis. La diálisis peritoneal y la
ria macroscópica. La persistencia de una hematuria hemodiálisis tienen indicaciones precisas en
microscópica o proteinuria discreta no obligan en aquellos casos con insuficiencia renal aguda
modo alguno a mantener el reposo en cama. severa. Siempre debe ser
Dieta. La modificación de la dieta depende de la indicada por el nefrólogo.
severidad del edema, de la hipertensión arterial y
del grado de insuficiencia renal. Lo fundamental es Glomerulonefritis aguda
la restricción del sodio a 1 o 2 g/d. La ingesta pro-
teico-calórica debe ser mantenida lo más cerca po- no estreptocócica
sible a los valores normales. Sólo se indicará La incidencia de glomerulonefritis aguda
restringir las proteínas en los casos con insuficien- posestrep- tocócica ha disminuido de manera
cia renal severa. significativa en los países desarrollados; sin
La ingestión de líquidos sólo se limitará en los embargo, otras formas de glomerulonefritis aguda
casos con edema severo, oliguria o anuria. El méto- posinfecciosa se han tor- nado relativamente más
do más eficaz para determinar si el aporte de líqui- frecuentes. En los últimos años se ha demostrado
dos es adecuado, lo constituye la medición diaria que casi todos los agentes infecciosos pueden
del peso corporal y del volumen urinario. desencadenar una glomerulone- fritis aguda
Antibióticos. Se utiliza penicilina rapilenta, 1 mi- (cuadro 8.1).
llón de unidades por vía IM durante 10 días, aun
cuando los cultivos para el estreptococo betahemo- CUADRO 8.1
AGENTES INFECCIOSOS ASOCIADOS
lítico sean negativos. Se han señalado resultados si- CON GLOMERULONEFRITIS
milares con la administración de 1 o 2 millones de
unidades de penicilina benzatínica IM como terapia Bacterias. • Staphylococcus aureus.
única. En los pacientes alérgicos a la penicilina se • Estafilococo viridans.
• Estafilococo epidermis.
• Estreptococo neumoniae.
• Neisseria gonorrheae y meningitidis.
102
• Bacilos gramnegativos (Pseudomona aeru- liales de la cápsula de Bowman, con formación de
ginosa, Escherichia coli, Proteus vulgaris). semilunas en los glomérulos.
• Leptospiras. Fueron Volhard y Fahr, en 1914, los primeros en
• Salmonella typhi. reconocer la asociación entre la presencia de las se-
• Treponema pallidum. milunas y el curso clínico desfavorable de estas
• Micobacterium leprae. glo- merulopatías, y las denominaron
• Corinebacterium. glomerulonefritis extracapilar; más tarde, en 1942,
Ellis les dio el nom- bre de glomerulonefritis
• Coxiella burnetti.
rápidamente progresiva
Virus. •Hepatitis B y C. (GNRP). Otras denominaciones propuestas han
sido las de glomerulonefritis maligna,
• Citomegalovirus.
glomerulonefritis aguda necrosante y
• Epstein-Barr. glomerulonefritis semilunar.
• Enterovirus. En el 70 % de los pacientes se presentan como
• Parotiditis. una afección renal primaria o idiopática, mientras
• Sarampión. que en el 30 % restante es secundaria a un gran nú-
• Varicela-zóster. mero de enfermedades sistémicas, infecciosas, au-
• Rubéola. toinmunes o neoplásicas.

Hongos. • Coccidioides imitis. Patogenia


La producción de interleukina I, la interacción de
Protozoarios.• Plasmodium falciparum y malariae. las moléculas de adhesión y la proliferación local
• Toxoplasma gondii. de los macrófagos, se han señalado como factores
que intervienen en la génesis de las lesiones.
Helmintos. • Trichinella spiralis. Desde el punto de vista de la inmunología, la
• Schistosoma manzoni. GNRP ha sido dividida en tres categorías, que son
• Wuchereria bancrofti. las siguientes:
• Loa-loa. Tipo I: Enfermedad mediada por anticuerpos di-
rigidos de forma específica contra antígenos de
Las glomerulonefritis que aparecen consecutivas la MBG. En esta variedad los estudios con inmu-
a infecciones no estreptocócicas, también son cau- nofluorescencia muestran la presencia de depósitos
sadas por complejos inmunes. En la mayoría de los lineales y continuos de inmunoglobulinas, principal-
casos el compromiso renal es leve y reversible, aun- mente IgG, a todo lo largo de la MBG.
que en ocasiones se produce una progresión hacia la Cuando se asocia a hemorragia pulmonar,
insuficiencia renal, incluso cuando la infección es consti- tuye el síndrome de Goodpasture, ya que se
controlada. ha de- mostrado una reacción cruzada de los
anticuerpos anti MBG con las membranas basales
Glomerulonefritis de los alvéo- los pulmonares y que ambas
membranas basales comparten estructuras
rápidamente progresiva antigénicas similares. Aproxi- madamente el 20 %
de las GNRP pertenecen a este grupo.
Existe un grupo de glomerulonefritis, afortunamente Tipo II: Enfermedad mediada por inmunocomple-
poco frecuentes, que se caracterizan porque tenien- jos circulantes o formados in situ a nivel
do un comienzo insidioso o abrupto, evolucionan glomerular. Los estudios con inmunofluorescencia
de forma rápida, en semanas o meses, a la insufi- demuestran la presencia de depósitos granulares y
ciencia renal terminal si su curso no es modificado discontinuos de inmunoglobulinas acompañados
mediante la utilización de un tratamiento enérgico, habitualmente de complemento.
del cual se dispone en la actualidad
Dentro de este grupo se encuentran el 30 o 40 %
El hallazgo en la biopsia de estos pacientes es el de las GNRP. En la mayor parte de los casos son
de una importante proliferación de las células epite- secundarias a una enfermedad sistémica como:
lupus eritematoso diseminado, crioglobulinemia,
púrpura
103
de Schönlein-Henoch y las asociadas a algunas in-
fecciones.
Tipo III: Glomerulonefritis pauci-inmune o sin
depósitos inmunes; a esta categoría corresponde
el 40 % de las GNRP.
En un gran número de pacientes se ha detectado
por estudios serológicos, la presencia de anticuer-
pos anticitoplasma de neutrófilos (ANCA); este gru-
po incluye a enfermos con vasculitis necrotizante
sistémica.
Algunos autores incluyen otros 2 grupos: el tipo IV,
que representa una combinación del tipo I (anticuer-
pos anti MBG) y el III (asociado a ANCA); y el tipo
V, en el que las características de las lesiones son
simi- lares a las del tipo III, pero en el cual no se
detectan ANCA. Muchos la identifican como la
verdadera glomerulonefritis semilunar.

Anatomía patológica
La biopsia renal en los pacientes con GNRP confir-
ma la presencia de una glomerulonefritis con semilu-
nas epiteliales. Las características histopatológicas
consisten en una infiltración del espacio de Bowman Fig. 8. 1. Glomerulonefritis rápidamente progresiva. Los glo-
mérulos muestran engrosamiento de la cápsula de Bowman
por células mononucleares asociada a la prolifera-
con formación de semilunas. Nótese la fibrosis parcial y
ción del epitelio parietal de la cápsula de Bowman, las sinequias del penacho glomerular a la cápsula.
o en una proliferación extracapilar con formación
de semilunas, que pueden afectar del 30 al 100 % de
los glomérulos (Fig 8.1). derado rápidamente progresivo si se produce una
Las semilunas pueden ser segmentarias o circun- duplicación de los niveles de creatinina en el suero
ferenciales, ocupan todo el espacio de Bowman y en un período menor de 2 meses.
ahogan el ovillo capilar. Según el estado evolutivo, En casi todos los pacientes se observa al incio un
pueden clasificarse en celulares, fibrocelulares o síndrome nefrítico agudo con hematuria macro o
fibrosas, y representan fases progresivas del mismo microscópica, edemas, hipertensión arterial y oligu-
proceso. ria. La proteinuria de magnitud nefrótica es poco
frecuente. La hipertensión generalmente está rela-
Cuadro clínico cionada con la hipervolemia. En los casos secunda-
La GNRP puede aparecer en cualquier edad, pero rios a enfermedades sistémicas, a la sintomatología
afecta fundamentalmente a pacientes jóvenes o de renal se asociarán las manifestaciones propias de
edad media y del sexo masculino, en una propor- cada enfermedad.
ción de 2:1. El examen de orina revela la presencia de eritro-
El 50 % de los casos presenta síntomas prodró- citos dismórficos, cilindros hemáticos y un grado
micos que semejan una infección viral con fiebre, variable de proteinuria.
artralgias, mialgias, dolor abdominal y lumbar, aun-
que no se ha demostrado su asociación con ninguna Evolución
virosis específica. El comienzo, insidioso o agudo, La biopsia renal se considera de gran importancia,
se caracteriza por la instauración de una insuficien- no sólo para el diagnóstico, sino para decidir el tra-
cia renal rápidamente progresiva, que evoluciona en tamiento y orientar acerca del pronóstico.
semanas o pocos meses hacia el fallo renal grave o Los pacientes que muestran crecientes o semilu-
terminal. El deterioro de la función renal es consi- nas celulares e infiltrado inflamatorio instersticial,
104
tienen mejor pronóstico que los que presentan lesio- oral con la ciclofosfamida y la azatioprina, y la uti-
nes irreversibles, como esclerosis glomerular y lización del deoxipergualín, agente inmunosupresor
fibrosis instersticial. Los enfermos no tratados evo- que disminuye la infiltración de los macrófagos y
lucionan a la insuficiencia renal terminal en sema- la producción del factor de necrosis tumoral.
nas o en pocos meses.
Es raro, pero no excepcional, que en el desarrollo Síndrome de Goodpasture
de ciertas glomerulonefritis crónicas primarias bien Concepto
identificadas patológicamente, como las membrano- Se denomina así a la tríada compuesta por
proliferativas o la nefropatía por IgA, se injerten glomeru- lonefritis aguda, hemorragia pulmonar y
crecientes epiteliales que condicionan un rápido de-
producción de anticuerpos antiMBG, descrita por
terioro de la función renal.
Goodpasture en 1919 y que desde entonces lleva su
Tratamiento nombre. Etiopatogenia
Existen diferentes esquemas de tratamiento en de- El síndrome de Goodpasture es una enfermedad de
pendencia de la causa, severidad y estado de la en- causa inmunológica, y aún se desconoce ésta. Des-
fermedad. La historia del paciente, el examen físico, de el punto de vista de su mecanismo patogénico,
el resultado de la biopsia y los estudios serológicos, en la actualidad se sabe que anticuerpos circulantes
son indicadores importantes para decidir el trata- del tipo de la IgG están dirigidos de forma directa
miento. con- tra las cadenas alfa-3 del colágeno tipo IV,
Debido al mal pronóstico de esta nefropatía, se que es uno de los 6 componentes genéticamente
han ensayado múltiples regímenes terapéuticos con diferentes encontrados en el colágeno de la MBG.
esteroides, inmunosupresores, anticoagulantes, an- El colágeno tipo IV abunda en la membrana basal
tiagregantes plaquetarios, sueros antilinfocitarios y de los capila- res glomerulares y alveolares, y está
plasmaféresis. En la actualidad, el tratamiento se basa casi ausente en otros tejidos, razón por la cual el
fundamentalmente en el uso de esteroides e inmu- daño se limita al glomérulo y al alvéolo.
nosupresores.
Esteroides. Los pulsos de metilprednisolona han Cuadro clínico
logrado mejorar el curso evolutivo de la enferme- La forma más frecuente de la enfermedad es la
dad. La dosis varía entre 7 y 15 mg/kg, aunque mu- idio- pática, aunque se han descrito casos que
chos prefieren utilizar 1g EV administrado de forma aparecen después de una infección respiratoria
diaria o en días alternos, lentamente, durante 3 días.
viral o de la exposición a hidrocarburos volátiles.
48 h después de la última infusión se inicia la pred- Habitualmente, el cuadro clínico se presenta como
nisona oral, 2 mg/kg en días alternos (dosis máxi-
un síndrome glomerulonefrítico agudo acompañado
ma igual a 120 mg). La reducción de la dosis oral
depende de la evolución del paciente. de insuficiencia renal, que progresa en corto tiempo
Inmunosupresores (ciclofosfamida). Los pulsos de a la fase terminal. La proteinuria por lo general no
ciclofosfamida pueden sustituir a los de metilpred- es nefrótica. Todo este cuadro se asocia a manifes-
nisolona, con la dosis de 0,5 g/m2 o 1 g EV adminis- taciones pulmonares que incluyen: hemorragia pul-
trado mensualmente por un período de meses. monar, hemoptisis, infiltrado pulmonar difuso en los
La ciclofosfamida por vía oral se asocia a la pred-
rayos X de tórax y un aumento de la capacidad de
nisona con una dosis de 1 a 3mg/kg, ajustada para difusión para el monóxido de carbono causado por
mantener los niveles de leucocitos entre 3 000 la presencia de hemoglobina en el alvéolo.
y 5 000 /mm (3,0 . 10 y 5,0 . 10 /L) hasta un año También puede aparecer anemia acompañada de la
3 9 9

después de la última remisión. deficien- cia de hierro causada por el sangramiento


El beneficio de la plasmaféresis ha sido reporta- crónico. Diagnóstico
do en pacientes que han requerido diálisis al mo- Se sospecha esta enfermedad en cualquier pacien-
mento de la presentación. te que debuta con una glomerulonefritis aguda,
En la actualidad se ensayan nuevos regímenes
terapéuticos, como la asociación de la prednisona
105
particularmente si se acompaña de insuficiencia re- dad de la MBG para las proteínas plasmáticas, tie-
nal progresiva y hemorragia pulmonar. nen un papel imortante.
El diagnóstico definitivo debe sustentarse en la En general, el síndrome nefrótico debe plantear-
demostración de anticuerpos antiMBG en el suero se siempre que exista una proteinuria mayor de 3 g
determinados por ELISA (Enzyme-linked immu- en orina de 24 h y una seroalbúmina inferior a 25
nosorbent assay) y el análisis histopatológico con g/L, aun en ausencia de los otros componentes
inmunofluorescencia que demuestra depósitos linea- clásicos del cuadro.
les de IgG en la membrana basal de los capilares
glomerulares. Historia
A principios del siglo pasado, Friedrich Müller de-
Tratamiento nominó nefrosis a los trastornos renales caracteriza-
El tratamiento debe ser enérgico con esteroides e dos por gran edema y proteinuria masiva, que él
inmunosupresores combinados con plasmaféresis. Se estimó de naturaleza degenerativa en oposición a la
obtendrán mejores resultados si éste se instaura cuan- nefritis o procesos inflamatorios que había descrito
do los niveles de creatinina plasmática son inferio- Bright. Munk creyó confirmar la naturaleza dege-
res a 5 mg/dl (442 mmol/L). nerativa de estos trastornos por el hallazgo de
lipoides birrefringentes en la orina y los denominó
Los pacientes que no responden adecuadamente
nefrosis lipoidea.
al tratamiento anterior, se someten a otro con diálisis
Volhard y Fahr atribuyeron el proceso a una de-
crónica en espera de un trasplante renal.
generación tubular, y desde entonces se consideró
que el riñón podía ser afectado por procesos nefríti-
cos glomerulares (hematuria e hipertensión arterial)
GLOMERULOPATÍAS y por procesos nefróticos tubulares (edema y pro-
teinuria), totalmente distintos unos de otros. La ob-
DE COMIENZO servación clínica demostró bien pronto que muchos
INSIDIOSO pacientes tenían de forma simultánea síntomas ne-
fríticos y nefróticos, por lo que se pensó que
padecían dos enfermedades. De esta época data la
Este grupo de enfermedades glomerulares se carac- terminolo- gía de glomerulonefritis con
teriza por presentar un comienzo poco preciso. Al- componente nefrótico. Bell fue uno de los primeros
gunas veces hay sólo síntomas aislados, pero con en demostrar que el sustrato de todos estos cuadros
gran frecuencia aparece en su evolución o en su ini- nefríticos y nefróticos era una lesión glomerular y
cio un síndrome nefrótico, y suelen decursar no tubular, y que la pro- teinuria se debía de
tórpidamente. manera exclusiva a un aumento de la
Toda vez que la presencia del síndrome nefrótico permeabilidad de la MBG para las proteínas
domina el cuadro clínico de estas glomerulopatías, plasmáticas; según el capilar glomerular estuviera
resulta necesario analizar las características de este indemne o afectado, se produciría un cuadro nefró-
síndrome antes de adentrarnos en el estudio particu- tico “puro” o “mixto” (con manifestaciones nefrí-
lar de cada una de ellas. ticas), respectivamente. Propuso, además, la
sustitución del término nefrosis lipoidea por el de
Síndrome nefrótico síndrome nefrótico, más apropiado. Sus estudios,
junto con los de Allen, demostraron que las
Concepto lesiones
tubulares eran en realidad secundarias.
Clásicamente el síndrome nefrótico ha sido consi-
derado como un cuadro clínico-humoral caracteri- Etiología
zado por edemas, proteinuria, hipoproteinemia e
Las causas de este síndrome son múltiples, como se
hiperlipemia, consecutivo a múltiples enfermedades
mencionará a continuación, aunque las más
y de patogenia incierta, pero en la que factores in-
frecuen- tes son las glomerulopatías primarias y
munológicos que actúan aumentando la permeabili-
algunas se- cundarias, como la de la diabetes
mellitus (DM) y el lupus eritematoso diseminado
(LED):
106
A. Glomerulopatías primarias. • Síndrome nefrótico congénito.
1. Glomerulopatía por daño mínimo. • Enfermedad de Fabry.
2. Glomerulosclerosis segmentaria y focal. • Drepanocitemia.
3. Glomerulopatía membranosa. 7. Factores mecánicos.
4. Glomerulonefritis crecéntica o rápidamente • Pericarditis constrictiva.
progresiva. • Trombosis de la vena cava inferior.
5. Glomerulonefritis membranoproliferativa • Insuficiencia cardíaca congestiva.
tipos I y III. 8. Otros.
6. Glomerulonefritis proliferativa mesangial. • Glomerulopatía del reflujo vesicoure-
• Nefropatía por IgA. teral.
• Nefropatía por IgM. • Disfunción crónica del injerto renal.
B. Glomerulopatías secundarias. • Glomerulopatía del trasplante.
1. Enfermedades metabólicas.
• Diabetes mellitus. Fisiopatología
• Mixedema. La pared del capilar glomerular constituye la barre-
2. Enfermedades sistémicas. ra que impide el paso masivo de proteínas desde su
• Lupus eritematoso diseminado. luz al espacio urinario, y es sin lugar a duda el au-
• Amiloidosis. mento de la permeabilidad de dicho capilar
• Crioglobulinemias. glomeru- lar a las macromoléculas, el elemento
• Púrpura de Schönlein-Henoch. primario que desencadena las manifestaciones
• Poliarteritis nudosa. clínicas del síndro- me nefrótico. El origen del daño
• Artritis reumatoidea. al capilar glomeru- lar guarda relación con la
3. Enfermedades infecciosas. causa del síndrome nefrótico; así, por ejemplo, en
a) Bacterianas. los casos de glomeru- lopatía lúpica se debe a los
• Glomerulonefritis posestreptocócica. depósitos de complejos inmunes, mientras que en la
• Sífilis. glomerulopatía diabéti- ca está en relación con
alteraciones estructurales de Enfermedad renal
• Endocarditis.
b) Virales. 
• Hepatitis B. Daño capilar glomerular
• Hepatitis C. 
• Citomegalovirus. Aumento de la permeabilidad
• Síndrome de inmunodeficiencia adqui- a las proteínas plasmáticas
rida (SIDA). 
c) Parasitarias. Proteinuria
• Malaria.
• Esquistosomiasis. 
4. Enfermedades tumorales. Disminución de la presión oncótica
• Carcinoma de pulmón y colon. 
• Mielomas. Paso de H2O y Na al espacio intersticial
• Linfomas. Edema Hipovolemia
5. Fármacos, toxinas, alergia. Aumento de la reabsorción Reducción del flujo
de H
• Sales de oro.
• Captopril.
O y Na sanguineo renal
• Vacunas. 2

• Antinflamatorios no esteroideos. 
• Picadura de insectos. Aldosteronismo Liberación de
secundario renina
6. Enfermedades heredofamiliares.
• Síndrome de Alport. Fig. 8.2. Mecanismo clásico del edema en el síndrome nefrótico.

107
ellos. El síndrome nefrótico por daño mínimo pare- Enfermedad renal
ce vinculado con alteraciones en la inmunidad celu-
lar. Independientemente de la causa, se producirá Aumento de la permeabilidad Retención renal de agua y
glomerular a las proteínas sodio
una pérdida exagerada de proteínas plasmáticas por la
orina, que ocasionará una hipoproteinemia (Fig. 8.2).  
En relación con la magnitud del daño del capilar glo- Proteinuria Expansión del volumen
merular, la proteinuria será sólo de albúmina (daño plasmático
mínimo), o se perderán también globulinas (otras 
glomerulopatías). De todas formas, la albúmina es Hipoalbuminemia Aumento  de la presión
hidrostática capilar
la proteína de menor peso y la que con más facili-
dad se pierde.
La hipoalbuminemia conduce a una disminución Pérdida de líquido en el
de la presión oncótica, que produce un desequili- espacio intersticial
brio de las fuerzas de Starling, de la cual depende la 
homoestasis del agua en los capilares y el intersti- Edema Supresión del sistema
cio. Así, en el extremo arteriolar la presión hidros- renina-angiotensina-
tática dentro del capilar excede a la presión oncótica aldosterona
y conduce al paso de líquido al espacio intersticial, y Fig 8.3. Mecanismo de la retención renal primaria de sodio en
en el extremo venoso, la presión oncótica, que es la formación del edema en el síndrome nefrótico.
directamente proporcional a la cantidad de proteí-
nas plasmáticas y se ejerce en sentido inverso, tien- La primera expresa que la reducción de la pre-
de a retener agua dentro del capilar; con el desarrollo sión oncótica conduce a un aumento en la pérdida
de la hipoalbuminemia este proceso se altera, lo que de líquido a través de los capilares sistémicos hacia
facilita que el agua pase al intersticio y traiga como el espacio intersticial, alteración que es compensa-
consecuencia el edema, si la cantidad de líquido fil- da completamente o en su mayor parte por un
trado excede al flujo máximo linfático que reabsorbe incre- mento del retorno linfático desde la periferia
líquidos hacia el lecho vascular y si el total de pro- y por la disminución de la presión oncótica en el
teínas séricas ha disminuido hasta 40 g/L o menos. intersti- cio. La segunda plantea que a
Al pasar agua y sodio al intersticio por el consecuencia de la enfermedad que lo origina, en
desbalance de las fuerzas de Starling, se produce una el riñón nefrótico hay una disminución de su
hipovolemia, que a su vez activa el eje renina-an- capacidad para excretar la carga de agua y sodio
giotensina-aldosterona y aumenta la retención de debido a factores renales in- trínsecos (reducción
agua y de sodio por los túbulos renales en respuesta del filtrado glomerular, aumento de la reabsorción
fisiológica a la pérdida de volumen plasmático. tubular). Esta retención de agua y de sodio, que
De continuar la proteinuria y, por tanto, la hipo- además no se relaciona con las necesi- dades del
proteinemia, se perpetúa este mecanismo fisiopato- volumen plasmático, produce una expan- sión de
génico. Ésta es la llamada teoría clásica del edema éste, que aumenta la presión hidrostática a nivel
en el síndrome nefrótico (underfill edema). Sin em- del lecho capilar sistémico en el momento en que
bargo, éste no es el único mecanismo del edema en los mecanismos que emplea el organismo para
el síndrome nefrótico, puesto que existen pacientes contrarrestrar la formación del edema (incremento
en los cuales el volumen plasmático es normal o está del flujo linfático y disminución de la presión
incrementado, con el eje renina-angiotensina-aldos- oncó- tica intersticial), han alcanzado un grado
terona frecuentemente normal o suprimido en los máximo; de ahí que el edema sea el resultado de la
casos con expansión de volumen. A consecuencia combina- ción de dos procesos que se desarrollan
de ello se ha elaborado la teoría del overfilling o al mismo tiempo: la retención primaria de agua y
retención primaria de sodio, para explicar la forma- sodio, unida a la proteinuria que disminuye la
ción del edema en el síndrome nefrótico, que por lo presión oncótica en el plasma y en el intersticio,
general envuelve dos eventos paralelos (Fig 8.3). lo que supera las defensas del organismo contra la
aparición del ede- ma al privar al sistema linfático
de su capacidad para responder al incremento de la
presión hidrostática.
108
El organismo siempre trata de normalizar la hi- trastornos clínicos y humorales que se ven por lo
poalbuminemia y con ello la presión oncótica, y co- general, aparte de la proteinuria, en el síndrome ne-
mienza entonces a sintetizar proteínas de mayor peso frótico, lo que explica que en pacientes con protei-
en el hígado. Entre estas proteínas se encuentran el nurias intensas no se observan manifestaciones
fibrinógeno, factores procoagulantes, las alfa-2 y clínicas, mientras que otros con proteinurias más
betaglobulinas, donde están las lipoproteínas, hecho bajas en la orina presentan un síndrome nefrótico
demostrado por la situación clínica de que en los florido. El edema se instala con frecuencia en
síndromes nefróticos aparece un aumento de estos forma progresiva en 7 o 10 días, aunque puede
elementos, y cuando la enfermedad remite, los ni- aparecer en el curso de una noche.
veles séricos vuelven a la normalidad. En el examen de orina se encuentra una
Las betaglobulinas transportan grasa de los depó- proteinu- ria mayor de 3 g/L en 24 h. Esta
sitos de lípidos al hígado, vía energética utilizada proteinuria está constituida fundamentalmente por
por esta glándula para la formación de proteínas; al albúmina, que tie- ne bajo peso molecular, pero a
mismo tiempo, la betaoxidación de las grasas pro- veces se hallan can- tidades apreciables de
voca un aumento de los lípidos en la sangre. Se ha betalipoproteínas, alfa 2- globulinas,
señalado, además, una inhibición de la lipólisis con complemento y gammaglobulinas, que según
hipoalbuminemia severa. algunos autores constituye un signo de mal
Por último, la tendencia a la hipercoagulación, pronóstico porque indica una mayor lesión del
comúnmente observada en el síndrome nefrótico, capi- lar glomerular.
guarda relación con las principales manifestaciones Otro hallazgo importante en el examen de orina
clinicohumorales de éste; así, la hipoalbuminemia lo constituyen los cilindros grasos, células epitelia-
como tal aumenta la agregación plaquetaria, y el es- les que contienen gotas de grasa, y los lipoides birre-
fuerzo del organismo por elevar la presión oncótica fringentes (cruces de Malta), que traducen la
disminuida lleva a un incremento de la síntesis he- lipiduria de esta afección. Puede haber o no
pática de fibrinógeno y factores procoagulantes, lo hematuria mi- croscópica y leucocituria, y
que unido a la pérdida urinaria de inhibidores de la generalmente la orina tiene una densidad elevada
coagulación, tales como la antitrombina III, las pro- y es pobre en sodio; a veces se observan
teínas C y S, la presencia de hipovolemia y la hemo- glucosuria y aminoaciduria, que indican lesión del
concentración con que en muchas ocasiones cursa túbulo proximal.
la nefrosis, explican la incidencia de fenómenos Como consecuencia de la proteinuria en la elec-
tromboembólicos encontrados en ella. troforesis de las proteínas hay hipoalbuminemia,
con una cifra de albúmina siempre inferior a 30
Cuadro clinicohumoral g/L, y que en ocasiones desciende hasta 0,5 g/L;
El cuadro clínico del síndrome nefrótico, con inde- se pre- senta aumento de la fracción alfa-2 y de las
pendencia de su causa, se limita a síntomas genera- betaglo- bulinas, así como un comportamiento
les (astenia, anorexia, náuseas ocasionales, diarreas, variable de las gammaglobulinas, según la
y falta de aire), síntomas urinarios (oliguria) y ede- glomerulopatía que originó el síndrome nefrótico,
ma, que tiene todas las características del edema re- como se verá en el estudio particular de éstas. Hay
nal: blanco, blando, frío, indoloro y de fácil godet inversión del índice serina-globulina.
con predilección por los tejidos laxos, como el es- Los lípidos plasmáticos, tales como el colesterol
croto, los párpados y las regiones declives. Con fre- y sus ésteres, los fosfolípidos y las lipoproteínas de
cuencia el edema es generalizado, invade las serosas baja y muy baja densidad, están aumentados en
y constituye un anasarca; otras veces es muy esca- gra- do variable según la causa. A veces se observa
so, prácticamente limitado a un abotagamiento fa- una disminución del yodo unido a las proteínas
cial que ocasiona la facies de muñeco chino o a (PBI) causada por el descenso de la globulina
discretos edemas maleolares, aunque en diferentes transporta- dora de la tiroxina.
etapas del síndrome puede no existir; esto obedece a La eritrosedimentación con frecuencia está muy
diversos factores que alteran el desarrollo de los acelerada y no es raro encontrarla por encima
de 100 mm en relación con el aumento de la
globulina alfa-2, la betaglobulina y el fibrinógeno.
109
Diagnóstico coagulación sanguínea, específicamente anti-
Se basa en demostrar una proteinuria masiva mayor trombina III, y del aumento de la síntesis
hepá- tica de fibrinógeno (trombosis de la
de 3 g en orina de 24 h y una hipoalbuminemia
vena renal, reconocida hoy en día como
intensa, inferior a 25 g/L. Los exámenes comple-
consecuencia del síndrome nefrótico y no
mentarios anteriormente mencionados, unidos a in-
como causa); trombo- sis del seno sagital y de
vestigaciones más especiales, como: dosificación de
la arteria pulmonar.
complemento e inmunocomplejos y la biopsia renal
5. Pérdida de proteínas transportadoras de
percutánea, que serán indicados según cada caso en
hormo- nas, vitaminas y minerales
particular, permitirán conocer el diagnóstico etioló-
(pérdida de transferrina plasmática y de la
gico del síndrome.
proteína trans- portadora de colecalciferol,
Evolución y pronóstico con tendencia a la hipocalcemia y resistencia a
la acción calcémica de la paratormona).
El síndrome nefrótico puede evolucionar como un
6. Complicaciones dolorosas abdominales del
episodio que desaparece con tratamiento específi-
síndrome nefrótico, accidente clásico pero ex-
co, rara vez espontáneamente, o caracterizarse por
remisiones y recurrencias, o adoptar una forma per- cepcional hoy en día y de naturaleza e indivi-
sistente, donde se acompaña de pérdida progresiva dualidad inciertas.
de la función renal en dependencia de la enferme- 7. Alteraciones en el metabolismo de las drogas
dad subyacente. Su pronóstico está influido por una debido a disminución en la unión a las pro-
serie de factores cuya presencia indica que su evo- teínas.
lución no es favorable. Estos son: 8. Resistencia diurética.

1. Hipertensión arterial. Glomerulopatías primarias


2. Hematuria significativa y prolongada.
3. Anemia.
de comienzo insidioso
4. Elevación de los azoados. Glomerulopatía por cambios
5. Colesterol sérico bajo. glomerulares mínimos
6. Proteinuria no selectiva.
7. Síndrome nefrótico que aparece en pacientes Es la enfermedad glomerular que se caracteriza clí-
viejos. nicamente por la presencia de un síndrome nefróti-
8. Complemento sérico disminuido. co, que muchas veces aparece después de una
9. Duración del síndrome nefrótico por más de 6 infección del tracto respiratorio superior y que en
meses. ocasiones regresa con el tratamiento o después de
10. Corticorresistencia y recaídas frecuentes. una infección intercurrente, como sarampión,
varicela, etc. Es más frecuente en el niño y sólo
Complicaciones representa el
Se enunciarán sólo las complicaciones del síndrome 25 o 30 % de los síndromes nefróticos del adulto.
nefrótico propiamente dicho: El síntoma fundamental lo constituye el edema,
que puede llegar al anasarca. La hipertensión
1. Complicaciones infecciosas, favorecidas por la arte- rial y la hematuria microscópica sólo están
pérdida urinaria de inmunoglobulinas con re- presen- tes en una minoría de pacientes. Éstos
ducción de la inmunidad celular (neumonías, son muy propensos a las infecciones, las que
septicemia, abscesos subcutáneos, peritonitis). fueron causa frecuente de muerte antes del
2. Malnutrición proteica grave. empleo de los antibió- ticos. En ocasiones se
3. Disfunción tubular por incremento de la reab- presenta la llamada crisis nefrótica, que se
sorción tubular de las proteínas. caracteriza por signos de peritonis- mo con
4. Complicaciones tromboembólicas que resultan fiebre o no y que se trata con transfusiones de
de la hipovolemia y hemoconcentración, de la plasma, albúmina humana por vía EV y antibió-
pérdida urinaria de algunos inhibidores de la ticos. En realidad, el advenimiento de los
antibióti-
110
cos y diuréticos potentes ha hecho excepcional esta Glomerulosclerosis segmentaria
contingencia.
La fisiopatogenia exacta de este síndrome aún se y focal
desconoce, aunque los mecanismos de lesión glo- Esta entidad clinicopatológica, también denomina-
merular han podido ser mejor dilucidados. Así, hoy da hialinosis segmentaria y focal, se presenta con
en día se les da un papel preponderante a las cito- una proteinuria que suele alcanzar los valores de un
quinas, las que provocan alteraciones de la polari- síndrome nefrótico. La frecuencia de hematuria e
dad de la MBG que facilitan el paso de las proteínas hipertensión arterial, así como su evolución a la in-
plasmáticas, fundamentalmente de la albúmina. Es- suficiencia renal crónica, la distinguen de la
tudios recientes han demostrado que el daño directo glomeru- lopatía por daño mínimo.
a los podocitos también influye en la aparición de la La patogenia exacta de esta enfermedad no es
proteinuria. aún bien conocida. Actualmente se describe la
Desde el punto de vista histológico, con el mi- existen- cia de ciertos “factores circulantes” todavía
croscopio óptico no se aprecian lesiones glomerula- no bien dilucidados (linfoquinas, factores virales,
res (Fig. 8.4), pero con el electrónico se observa la genéticos, los macrófagos, etc.), los que lesionan
fusión de los pedicelos de los podocitos y el cito- las células epiteliales viscerales (podocitos) y alteran
plasma de estas células epiteliales extendido irregu- su permeabi- lidad y función. Estas células dañadas
larmente sobre la superficie externa de la MBG. En quedan sepa- radas de la MBG, sobre la cual
descansan. La membrana basal desprotegida se
ocasiones se ve un engrosamiento segmentario de
pone en contacto con las células epiteliales
ésta. No existen depósitos de inmunocomplejos a la
parietales, lo que da lugar a sinequias y, por último,
inmunofluorescencia.
a la esclerosis glomerular. Los capilares
glomerulares quedan obliterados por un material
acelular.
Sólo se afectan parcialmente (segmentario) al-
gunos glomérulos (focal), con preferencia los que
se localizan en la región yuxtamedular, por lo que
una biopsia renal muy superficial puede no
alcanzar las áreas afectadas y provocar el
diagnóstico erró- neo de glomerulopatía por daño
mínimo. Existe, ade- más, marcada fibrosis
intersticial y atrofia tubular severa.
El curso clínico de la enfermedad está relaciona-
do con la intensidad de la proteinuria. La presencia
de un síndrome nefrótico ensombrece el pronóstico,
Fig. 8.4. Glomerulopatía por daño mínimo. Nótese el aspecto pues la evolución a la insuficiencia renal crónica
prácticamente normal del glomérulo visto en el microscopio ocurre en un período de tiempo relativamente cor-
óptico. to (2 a 3 años). Los enfermos por lo general no res-
ponden al tratamiento con corticosteroides, ni aun
La orina tiene las alteraciones propias de un sín- asociados a los inmunosupresores; sin embargo, en
drome nefrótico. La hematuria microscópica sólo las últimas décadas se han ensayado estos medica-
aparece en el 20 % de los pacientes, la proteinuria mentos en altas dosis y por un período prolongado
es casi exclusivamente de albúmina, y en la química (6 meses o más) y se describen resultados
sanguínea se destaca la existencia de hipogamma- alentadores. Glomerulopatía
globulinemia.
Esta enfermedad se caracteriza por su respuesta
membranosa Originalmente se pensó que
dependía del aumento del material de la membrana
satisfactoria al tratamiento con esteroides y en aque-
basal, pero hoy se co- noce que se debe a la
llos pacientes corticorresistentes, a su asociación con
presencia de inmunocomple- jos de localización
un medicamento inmunosupresor. subepitelial adyacentes a la membrana basal,
formados in situ, producto de la
111
reacción de anticuerpos contra antígenos locales. De
ahí sus sinónimos de peri, epi y extramembranosa.
Cuando no está relacionada a ningún factor, cons-
tituye la glomerulopatía membranosa idiopática
(GPMI); en otras ocasiones se asocia a enfermeda-
des sistémicas como LED, infecciones como hepa-
titis B y lúes, neoplasias (carcinoma del pulmón y
colon), enfermedades metabólicas, como DM, etc.,
y se le denomina entonces glomerulopatía membra-
nosa secundaria.
La GPMI se presenta a cualquier edad, pero se ve
más a partir de la tercera década de la vida (es más
frecuente en la quinta) y en el sexo masculino. De
manera habitual se manifiesta como un síndrome ne-
frótico con hematuria microscópica o sin ella. Su
comienzo es insidioso y evolutivamente puede apa-
recer hipertensión arterial y grados variables de
merma de la función renal.
Histológicamente, con el microscopio óptico y con
la coloración de plata metenamina, se aprecian pro-
longaciones de la membrana basal glomerular en el
espacio subepitelial, llamadas púas o spikes. En la Fig. 8.5. Glomerulonefritis proliferativa. Marcada prolifera-
inmunofluorescencia se encuentran depósitos granu- ción celular del capilar glomerular.
losos de IgG y C3 en las paredes capilares periféri-
Además de las manifestaciones clínicas, el diag-
cas. Con la microscopia electrónica se comprueba nóstico debe sustentarse en la existencia de una
la presencia de las prolongaciones mencionadas. Con hipocomplementemia persistente y en el examen
el progreso de la enfermedad van aumentando en histológico del parénquima renal. Los estudios con
tamaño y número los depósitos subepiteliales hasta microscopia óptica, y sobre todo electrónica, han
obliterar la luz de los capilares glomerulares. de- mostrado que las glomerulonefritis
Glomerulonefritis membranopro- liferativas se pueden clasificar en
tres tipos, según la localización de los depósitos
membranoproliferativa en la pared de los capilares glomerulares.
Es una forma difusa de glomerulonefritis prolifera- En el tipo I, las paredes presentan una imagen de
tiva de evolución crónica con hipocomplementemia, doble contorno y en todos los casos se encuentran
que se caracteriza morfológicamente por engrosa- depósitos mesangiales y subendoteliales. En el
miento de la pared de los capilares y proliferación tipo II, el engrosamiento de las paredes capilares se
celular (Fig. 8.5). También se le denomia glomeru- debe a la presencia de material anormal, electro-
lonefritis mixta, lobular o mesangio-capilar. denso, localizado en el seno de la membrana basal.
Desde el punto de vista clínico se presenta a cual- Igualmente, estos depósitos se encuentran en la
quier edad, aunque predomina entre los 5 y 28 años. cáp- sula de Bowman y en las membranas
En un 30 % de los casos está precedida de un episo- basales tubulares. Esta forma se denomina
dio respiratorio o amigdalino. Su forma de aparecer glomerulonefri- tis membranoproliferativa con
habitual es la de un síndrome nefrótico. En una ter- depósitos densos in- tramembranosos o
cera parte de los casos el cuadro clínico inicial con- enfermedad de los depósitos densos.
Recientemente se ha descrito una tercera forma,
siste en un síndrome nefrítico agudo (proteinuria,
cuya característica es la presencia de depósitos sub-
hematuria macroscópica con insuficiencia renal o sin
endoteliales y subepiteliales contiguos a la ruptura,
ella, e hipertensión arterial).
reduplicación y aspecto laminar de la lámina densa.
112
El pronóstico a largo plazo es desfavorable. La las membranas basales son normales. No hay
evolución de la enfermedad es muy variable y com- seg- mentos de esclerosis. Desde el punto de
prende desde un proceso rápidamente progresivo vista ultraestructural, hay pequeños depósitos
hasta una afección benigna caracterizada por una electro- densos en regiones mesangiales en
proteinuria permanente aislada, o una hematuria ma- aproximada- mente el 50 % de los casos. Cuando
croscópica recidivante. Salvo algunos casos de re- la proteinuria es importante, hay fusión de
misión completa, la evolución suele ser lenta y los pies de los podocitos.
progresiva hacia la insuficiencia renal. No parece
existir ninguna medida que sea eficaz en el trata- Cuadro clínico
miento de la glomerulonefritis membranoprolifera- Aparece a cualquier edad, pero es más común en
tiva. En la actualidad se aconseja un tratamiento niños y adultos entre la segunda y tercera décadas
sintomático con especial interés en el control de la de la vida, con predominio en el sexo masculino.
tensión arterial. Hay cuatro formas clínicas mediante las cuales
las GNPM se manifiestan con mayor frecuencia:
Glomerulonefritis proliferativa
mesangial • Proteinuria asintomática.
• Proteinuria importante, a menudo nefrótica.
En su conjunto, a las lesiones glomerulares caracte- • Hematuria microscópica aislada.
rizadas por un aumento de la celularidad mesangial, • Proteinuria con hematuria.
se les denomina glomerulonefritis proliferativa me-
sangial (GNPM). En muchos casos este patrón de Lo más común es la instalación insidiosa de una
lesión al microscopio de luz se asocia con depósitos proteinuria importante. La hipertensión arterial li-
inmunes granulares en regiones del mesangio. gera está presente en más de un tercio de los
Existen numerosos trastornos que tienen esa apa- pacien- tes. Es posible que ya exista una azoemia
riencia, como es el caso de enfermedades con inmu- moderada en el momento del diagnóstico en un 25
nopatología o características clínicas específicas, a 50 % de los casos.
como la nefropatía por IgA, púrpura de Schölein- La evolución es variable y para la mayoría de-
Henoch, LED, además de artritis reumatoidea, fiebre pende de la manifestación inicial. Los pacientes
reumática y fases resolutivas de las glomerulonefri- con hematuria aislada usualmente mantienen una
tis posinfecciosas. fun- ción renal normal por un tiempo considerable,
En este acápite se abordarán las GNPM no aso- a pe- sar de que el grado de hematuria puede ser
ciadas a estas enfermedades ni a depósitos de IgA. bastante variable.
Estas GNPM primarias se nombran según el tipo El curso clínico suele incluir remisiones intermi-
de depósito inmune que predomina en las regio- tentes y episodios ocasionales de hematuria
nes del mesangio mediante la inmunofluorescen- macros- cópica. Los enfermos con proteinuria
cia; así, la GNPM por IgM es el tipo que se importante progresan a la insuficiencia renal
encuentra con mayor frecuencia. Otras GNPM in- crónica, aunque de forma común esto ocurre en
cluyen los tipos por C1q, IgG y C3, todas en ex- varios años.
tremo infrecuentes. La terapeútica no ha sido bien definida. Los este-
En general, las GNPM se encuentran en menos roides están indicados sólo en los casos con síndro-
del 10 % de las biopsias de pacientes con síndrome me nefrótico. El uso de citostáticos es polémico.
nefrótico primario.
Glomerulopatía
Rasgos patológicos por depósitos
La apariencia al microscopio óptico varía desde glo-
mérulos normales hasta aquellos con grados mode- de inmunoglobulina A(IgA)
rados de hipercelularidad mesangial; en general, El diagnóstico de los pacientes que tienen como ex-
todos los glomérulos en una biopsia tienen un grado presión clínica una hematuria aislada, ha sido siem-
similar de afectación. La luz y paredes capilares y pre muy díficil, y hasta hace poco tiempo la
mayoría
113
de ellos se clasificaban como portadores de hematu- Anatomía patológica
rias “fantasmas”. En 1968, Berger y Hinglais des-
La microscopia óptica muestra diferentes patrones
cribieron por primera vez una enfermedad que se
(OMS):
caracteriza por la presencia de depósitos de IgA en
el mesangio, responsable de un gran número de las A. Lesiones glomerulares menores.
antiguamente llamadas hematurias “fantasmas”. B. Glomerulonefritis focal, proliferativa segmen-
Concepto taria y lesiones necrotizantes con grado varia-
Es el tipo de glomerulonefritis lentamente progresi- ble de formación de semilunas.
va, caracterizada desde el punto de vista clínico por C. Glomerulonefritis proliferativa mesangial di-
hematurias recurrentes asociadas a infecciones res- fusa.
piratorias o digestivas, y desde el histológico por
proliferación mesangial y depósitos de IgA, sobre La inmunofluorescencia demuestra depósitos di-
todo en el mesangio. fusos de IgA y complemento en el mesangio, tam-
Constituye el 30 o 40 % de las glomerulopatías bién IgG, IgM y fibrina.
primarias en Japón y de 15 a 20 % en el norte de
Cuadro clínico
Europa, pero menos del 10 % en Norteamérica.
Aunque la mayoría de los pacientes presenta sólo
Fisopatología una hematuria recurrente, se ha señalado también la
Aunque el mecanismo exacto de desarrollo de la existencia de proteinuria, que en algunos casos al-
enfermedad no está del todo aclarado, existen va- canza valores compatibles con el criterio de síndrome
rias observaciones que sugieren que está asociada nefrótico. Otros enfermos apenas tienen manifesta-
con una anormalidad en la regulación de la IgA, ciones y son dignosticados cuando aparecen los
quizás en respuesta a antígenos ambientales a los sig- nos y síntomas de insuficiencia renal.
cuales el paciente está crónicamente expuesto. Se
han identificado los siguientes cambios en la ho- Evolución
meostasis de la IgA: Durante mucho tiempo la glomerulopatía por depó-
sitos de IgA fue considerada como una enfermedad
1. La concentración plasmática de IgA está au- de buen pronóstico; actualmente se sabe que la tasa
mentada en la mitad de los casos. de sobrevida renal a los 10 años es del 80 a 87 % y
2. Están presentes inmunocomplejos circulantes a los 20 años el 25 % ha llegado a la
que contienen IgA paralelo al curso de la en- insuficiencia renal crónica terminal (IRCT).
fermedad. Se han comprobado, además, recidivas de la
3. Existe un incremento de los linfocitos Ty B es- afec- ción en riñones trasplantados.
pecíficos para IgA luego de infecciones del
tracto respiratotio superior, situación no vista Tratamiento
en individuos normales. El tratamiento tiene varios aspectos.
Estos hallazgos llevan a pensar que una respuesta 1. Prevención de la exposición a antígenos am-
exagerada a la IgA mucosa hace que la enfermedad bientales: erradicación de focos infecciosos
sea clínicamente evidente. (tonsilectomía), restricción de antígenos ali-
Estudios in vitro sugieren que la IgA polimérica mentarios (gluten) y reducción de la
conduce a un aumento en la liberación de interleu- permeabi- lidad a antígenos alimentarios
kina-6 (IL-6), la cual puede promover la expansión (ensayos con ácido 5-aminosalicílico y
mesangial. Análisis por inmunohistoquímica reali- cromoglicato sódico).
zados en Japón, demuestran que en la infiltración 2. Manipulación de la respuesta inmune anormal
leucocitaria desempeña un papel importante la mo- con: esteroides, azatioprina, ciclofosfamida,
lécula de adhesión intercelular (ICAM-1) y el antí- dipiridamol, warfarina, ciclosporina,
geno asociado a función leucocitaria (LFA-1). fenitoína, ácidos grasos polisaturados omega
3 conteni- dos en el aceite de pescado.
3. Control de la HTA con IECA.
114
4. El trasplante renal es la elección una vez esta- merular y aspectos genéticos, como factores impor-
blecida la IRCT. tantes en la génesis de la ND. Con independencia
de los mecanismos involucrados, la hipertensión
Glomerulopatías intra- glomerular parece ser el responsable del
desarrollo de la glomerulopatía.
secundarias de comienzo Manifestaciones clínicas
insidioso Las manifestaciones clínicas de estos enfermos de-
penden del estadio evolutivo en que se encuentren.
Nefropatía diabética Raramente aparecen antes de los 10 años de evolu-
ción en la DM de tipo 1, mientras que de manera
La afectación del sistema urinario en el curso de la aproximada el 3 % de los casos nuevos de DM de
DM puede ser múltiple y se incluyen en ella la dis- tipo 2 la presentan antes de ese tiempo de evolu-
función vesical como consecuencia de la neuropatía ción; esto se debe a que esta última suele diagnosti-
diabética, la infección del tracto urinario, la papilitis carse varios años después de haber comenzado la
necrotizante y la glomerulopatía diabética. En el pre- enfermedad, ya que cursa al inicio de forma subclí-
sente acápite sólo se hará referencia a esta última, nica. Estos pacientes presentan con mucha frecuen-
conocida también como nefropatía diabética (ND). cia lo que ha dado en llamarse tripatía diabética,
Actualmente, junto con la nefropatía hipertensi- va, nefropatía, neuropatía y retinopatía.
es una de las principales causas de insuficiencia La hipertensión arterial es un síntoma habitual.
renal crónica en el mundo. En Estados Unidos cons- Los edemas aparecen en la medida en que progre-
tituye el 33 % de los pacientes que se incorporan a sa la enfermedad y a veces se desarrolla un
los planes de diálisis, con un costo aproximado anasarca. La ceguera como consecuencia de una
de 1,8 billones de dólares por año, por lo que repre- retinopatía proliferativa o maculopatía, así
senta no sólo un problema médico, sino también eco- como la expresión de macroangiopatía
nómico. (enfermedad cerebrovascular, coronaria,
vascular periférica), es de 2 a 5 veces más
Concepto frecuente en nefrópatas que en los que no lo son.
Se define como el cuadro clinicohistológico produ-
cido por la DM en los glomérulos. Clasificación
Epidemiología Estadio I: Hipertrofia e hiperfunción glomerular. El
principal cambio estructural es la hipertrofia glo-
La ND se desarrolla en el 30 % de los pacientes dia-
merular; el filtrado glomerular puede llegar hasta
béticos de tipo 1. El riesgo acumulativo de nefropatía
150 ml/min.
en diabéticos de tipo 2 varía considerablemente se- Estadio II: Silente, con excreción normal de al-
gún la raza; fluctúa de un 25 % en individuos de búmina. Estructuralmente se caracteriza por incre-
origen europeo hasta 50 % en otros grupos étnicos mento en el grosor de la MBG, y se mantiene aún
tales como: afrocaribeños, indios asiáticos y japo- la hiperfiltracion.
neses. En nuestro país, la ND es una de las causas Estadio III: Nefropatía diabética incipiente. Se
principales de incorporación a los planes de diálisis. caracteriza por microalbuminuria progresiva y per-
Patogenia sistente; se mantiene aún la hiperfiltracion
Diversas teorías han tratado de explicar la patoge- glomeru- lar y aparece la hipertensión arterial con
nia de la ND y en años recientes se han utilizado frecuencia. Estadio IV: Nefropatía diabética
distintos modelos de animales y cultivos de células manifiesta. Se caracteriza por proteinuria marcada,
para buscar los factores responsables de los cam- mayor de 0,5 g en 24 h, hipertensión arterial y la
bios estructurales, funcionales y bioquímicos. Ac- subsecuente caída del filtrado glomerular.
tualmente se señalan la hiperglicemia, los productos (Histológicamente se obser-
finales de la glicosilación avanzada, factores de cre- van los cambios característicos de la ND.)
cimiento o citoquinas, además de la hipertensión glo- Estadio V: Insuficiencia renal crónica terminal.
El paciente necesita de los medios sustitutivos de la
función renal para sobrevivir.
115
Anatomía patológica ria diagnosticable por métodos convencionales, y
Aunque no existen lesiones histológicas patognomó- es posible encontrar un aumento en los niveles de
crea- tinina sérica y disminución de la tasa de
nicas de la ND, hay algunas que se ven con mucha
filtración glomerular. Aquí se observarán los
frecuencia en esta afección:
cambios histo- lógicos característicos al
• Lesión difusa: consiste en un ensanchamiento microscopio de luz. El V se caracteriza por anemia,
uniforme de las regiones mesangiales. por lo general severa, e in- cremento marcado de la
• Lesión nodular: según aumenta el volumen de creatinina sérica con la consi- guiente caída del
la matriz mesangial, algunas áreas se hacen más filtrado glomerular, lo que conduce a la necesidad
prominentes que otras y toman una forma de la utilización de métodos susti- tutivos de la
nodular (Fig 8.6). función renal para sobrevivir. En la ecografía
resulta común ver disminución del tamaño de ambos
• Capuchón de fibrina: se sitúa en la pared capi- riñones, aunque a diferencia de otras entida- des, éstos
lar periférica y tiene forma de semiluna. pueden permanecer relativamente grandes.
• Gota capsular: está situada en la porción más
interna de la cápsula de Bowman y algunas ve-
Evolución y pronóstico
ces se asemeja a una gota, pero puede ser más De forma aproximada la tercera parte de los
extendida. pacien- tes diabéticos desarrollan una ND
• Hialinosis arteriolar: en el estadio inicial se acu- manifiesta. Los enfermos con proteinuria tienen
mulan pequeñas gotas de material intensamente una mortalidad re- lativa 40 veces superior a los
eosinófilo en la pared de las arteriolas glomeru- que no la poseen. Sin embargo, la importancia
lares. pronóstica de ésta en dia- béticos de tipo 2 es
considerablemente menor que en los de tipo 1.
Una vez diagnosticado el daño renal en la DM,
la evolución hacia el estadio final es progresiva y
sólo se logra enlentecerla o detenerla de manera
excep- cional con un tratamiento intensivo en los
estadios iniciales.

Tratamiento
En los estadios I, II y III el control metabólico
logra la desaparición de la microalbuminuria. La
terapéu- tica insulínica adecuada consigue la
detención del desarrollo de la ND en diabéticos de
tipo 1; sin em- bargo, una vez aparecida la
Fig. 8.6. Nódulos mesangiales hipocelulares redondeados (le- macroalbuminuria, este proceder no logra un efecto
siones de Kimmelstiel-Wilson) característica de la glomeru- similar.
losclerosis diabética. El control de la presión arterial hasta valores
de 130 y 80 mmHg o menos, consigue retardar la
Diagnóstico progresión de la ND y, según Brenner, en algún
En los estadios I y II es indispensable la determina- caso pudiera hasta hablarse de curación.
ción del filtrado glomerular. En el II se observará en Los IECA, y más recientemente los bloqueado-
el microscopio electrónico ensanchamiento de la res de los receptores de angiotensina, han
MBG. En el III es necesaria la determinación de demostra- do ser los hipotensores de elección. En
microalbuminuria; se considera como tal una tasa caso de no contarse con estos dos tipos de
de excreción de albúmina entre 30 y 300 mg/24 h o antihipertensivos, cualquier otro podría ser
entre 20 y 200 mcg/min. Ésta deberá ser positiva en, utilizado, ya que resulta obligado el control de la
al menos, dos determinaciones con un intervalo presión arterial en estos enfermos.
de 6 meses y en ausencia de infección, fiebre o hi- En los estadios iniciales la dieta debe ayudar al
perglicemia marcada. En el IV aparecerá proteinu- control metabólico y mientras no exista merma de
la función renal, resulta muy discutida la reducción
116
proteica. Una vez que se haya hecho evidente la caí- La manifestación más común es la proteinuria,
da de la filtración glomerular, se debe comenzar una que en algunos casos alcanza rango nefrótico; es
dieta que contenga proteínas de alto valor biológico fre- cuente la HTA y la hematuria. La
entre 0,6 y 0,8 g/kg de peso corporal/día. insuficiencia re- nal aguda o crónica de grado
variable generalmente se presenta en los tipos III,
Lupus eritematoso diseminado IV y V.
La afección renal en el LED tiene una incidencia El patrón de daño glomerular visto en el LED
total que probablemente excede el 90 % de todos (Fig. 8.7) está relacionado con el lugar de forma-
ción de los depósitos inmunes. Estos CI circulantes
los enfermos. Las principales anormalidades surgen
están compuestos de ADN-antiADN, aunque tam-
después del diagnóstico de la enfermedad (por lo
bién presentan agregados de nucleosomas, cromati-
general entre los primeros 6 a 36 meses).
na, C1q, lamininas, ubiquinas y ribosomas.
A pesar de que aproximadamente en el 30 % de
los portadores de LED se observan concentraciones
elevadas de creatinina plasmática, la evidencia de
disminución de la función renal es poco común en
los primeros años.
Se señalan varias formas de toma renal, la más
importante de las cuales es la enfermedad por com-
plejos inmunes (CI); origina una glomerulopatía que
ha sido clasificada morfológicamente en 1995 por
la OMS como sigue:

I. Glomérulo normal.
A. Negativo con todas las técnicas.
B. Normal con el microscopio óptico, y depó-
sitos con el electrónico y la inmunofluores-
cencia.
II. Alteraciones mesangiales puras (mesangiopa- Fig. 8.7. Glomerulonefritis lúpica. El capilar glomerular pre-
senta formaciones en “asa de alambre” y aspecto digitiforme.
tía).
A. Ensanchamiento mesangial y discreta hi-
El sitio de formación de los CI se relaciona con
percelularidad.
las características del antígeno y el anticuerpo. Los
B. Hipercelularidad moderada.
CI grandes o los antígenos aniónicos se depositan
III. Glomerulonefritis focal segmentaria. A.
en el mesangio y en el espacio subendotelial. El
Con lesiones necrotizantes activas. B.
Con lesiones esclerosantes activas. C. grado de depósito determina cuando el paciente
Lesiones esclerosadas. desarrolla una enfermedad ligera limitada al
IV. Glomerulonefritis difusa. mesangio o una glomerulonefritis más severa.
A. Ausencia de lesiones segmentarias. Por técnicas ELISA se han detectado niveles
B. Con lesiones necrotizantes activas. plas- máticos y urinarios elevados de
C. Con lesiones esclerosantes activas. moléculas de adhesión (ICAM-1 y VCAM-1) y
D. Lesiones esclerosadas. citoquinas proin- flamatorias (IL-6 e IL-8) en los
V. Glomerulonefritis membranosa difusa. pacientes con LED, las cuales, como se conoce,
A. Membranosa pura. inducen la proliferación celular y los mecanismos
B. Asociada con lesiones II A y B. de inflamación.
VI. Glomerulonefritis esclerosante avanzada. El pronóstico está en dependencia de la transi-
ción (cambio de un tipo morfológico a otro).
Desde el punto de vista clínico, estas glomerulo- El tratamiento, cuando se ha diagnosticado el
patías pueden ser benignas y asintomáticas (I) o len- daño renal, incluye esteroides solos o en
tamente progresivas y fatales (III, IV, V). combinación con ciclofosfamida y azatioprina por
vía oral o parente- ral, en forma de bolos
intermitentes según la severi- dad del daño.
117
Amiloidosis congo y observado en el microscopio de luz polari-
zada. La microscopia electrónica permite ver la es-
Es una enfermedad que se caracteriza por el depósi- tructura de las fibrillas.
to extracelular de material fibrilar compuesto por Los casos con amiloidosis secundaria que evolu-
subunidades de bajo peso molecular de una gran cionan a la insuficiencia renal crónica terminal,
variedad de proteínas plasmáticas, que incluyen: in-
deben ser tratados con diálisis peritoneal o hemo-
munoglobulinas de cadena ligera en la amiloidosis
diálisis. En la actualidad existen reportes que plan-
primaria, proteína amiloide A en la amiloidosis se-
cundaria, beta2-microglobulina en la amiloidosis tean que los pacientes con amiloidosis secundaria
están en capacidad de recibir un trasplante renal
asociada a la diálisis y proteína amiloide beta en la
siempre y cuando se logre controlar la causa de
enfermedad de Alzheimer y en el síndrome de Down.
Estas fibrillas tienen características especiales, ya ésta. Tratamiento del síndrome
que poseen una configuración en cruz beta a los ra- nefrótico
yos X, birrefringencia verde observada mediante el Es característico que las glomerulopatías de comien-
microscopio de luz polarizada después de la tinción
zo insidioso sean primarias o secundarias y cursen
con rojo congo e intensa fluorescencia amarillo-ver-
con un síndrome nefrótico, donde la proteinuria
dosa con thioflavina-T.
con frecuencia es masiva y la hipoalbuminemia
La amiloidosis primaria es poco frecuente y se
asocia al mieloma múltiple en menos del 1 % de los muy in- tensa, y en el que las medidas generales
casos. La secundaria es más común y aparece en el tomen gran valor en el tratamiento, sobre todo las
curso de procesos infecciosos e inflamatorios cróni- dirigidas a evitar las principales complicaciones
cos, como: bronquiectasia, tuberculosis, osteomie- del síndrome.
litis, enfermedad de Hansen, artritis reumatoidea,
colitis ulcerativa y enfermedad de Crohn, entre otros. Medidas generales
También se describe una forma hereditaria renal Reposo. El enfermo debe permanecer en cama
que es rara. mien- tras la sintomatología sea activa; la primera
La amiloidosis interesa cualquier órgano o tejido parte del reposo se realizará en un centro
de la economía; sin embargo, los más afectados son: hospitalario. Dieta. Debe ser hiposódica, con
riñón, hígado, corazón, bazo e intestino. restrición del clo- ruro de sodio a menos de 1 g en
Desde el punto de vista clínico, los pacientes con 24 h, con un conte- nido moderado de proteínas
amiloidosis suelen presentarse con hepatosplenome- entre 0,6 a 0,8 g/kg de peso/d, de alrededor de 35
galia, insuficiencia cardíaca, malabsorción intesti- calorías/kg de peso. El grueso de las calorías se
nal y alteraciones renales. aporta en forma de carbo-
Las manifestaciones clínicas de la enfermedad hidratos.
renal varían según el sitio donde se produce el de- El aumento de la ingestión de proteínas
pósito en la nefrona. Tanto la forma primaria como incrementa la proteinuria y no mejora la
la secundaria afectan los glomérulos, y cursa con concentración sérica de elas; por otra parte, está
una proteinuria que casi siempre tiene magnitud demostrado que la re- ducción de la ingestión
nefrótica, acompañada de edemas. La hipertensión proteica retarda la progresión de las enfermedades
arterial es rara, aun en presencia de insuficiencia re- glomerulares a la insuficiencia renal crónica.
nal. El deterioro de la función renal es lento. Los pa-
Diuréticos. Están indicados en todos los síndro-
cientes con amiloidosis primaria casi nuncan llegan a
mes nefróticos, pero antes de prescribirlos es im-
la fase terminal porque fallecen por otras causas.
portante apreciar el estado del volumen
Cuando el depósito es mayor en los vasos y
intravascular de cada paciente, pues si existieran
túbulos, la proteinuria puede ser ligera o estar au-
sente; en esta forma predominan las manifestacio- cambios tensio- nales ortostáticos que evidenciaran
una contracción del espacio vascular, no deben ser
nes de insuficiencia renal.
El diagnóstico de la lesión renal se basa en la de- usados o sólo bajo extrema vigilancia del enfermo.
mostración del depósito amiloide en el espécimen Se emplean la furosemida en dosis que oscila
obtenido por biopsia percutánea, teñido con rojo en- tre 80 y 480 mg diarios y la torasemida, 40
a 80 mg 1 o 2 veces al día. También se
utilizadan la clorotiazida (0,5 a 2 g/día),
hidroclorotizida (50 a 200 mg/día), metolazone
(2,5 a 20 mg/día),
118
bumetamide (0,5 a 10 mg/día), a los cuales puede ben suspenderse. La respuesta antiproteinúrica a
asociarse un diurético ahorrador de potasio como el este tratamiento nunca es rápida, ocurre de forma
aldactone, en dosis de 75 a 150 mg cuando no está gradual después de varias semanas de impuesto y
presente la insuficiencia renal. si no se alcanza con dosis altas, debe ser suspendi-
El objetivo del tratamiento diurético es estable- do. Resulta imprescindible detectar en algunos pa-
cer un balance negativo de sodio. cientes una estenosis de la arteria renal, sobre todo
En ocasiones existe una respuesta inadecuada a en enfermos añosos con aterosclerosis de las arte-
los diuréticos. La combinación de dos o más diuré- rias renales, pues el uso de los IECA puede
ticos que actúen en diferentes lugares de los túbulos povocar una marcada reducción del filtrado
renales en los cuales se produce la reabsorción de glomerular, con- dición que implica la suspensión
sodio, o simplemente la verificación de que se cum- inmediata de su uso.
pla una dieta restringida de sodio, o el cambio de la Los aceites de pescado (ácidoeicosapentanoide y
vía de administración de un diurético en un paciente el ácido decosahexanoide, parecen ejercer benefi-
en anasarca, de la vía oral a la EV, logra resultados cios al limitar la producción de eicosanoides y cito-
favorables. quinas liberadas durante la respuesta inflamatoria
Plasma y seroalbúmina. En caso de hipoalbumi- en la injuria glomerular; las experiencias han
nemias severas inferiores a 1,5 g %, grandes edemas sido pocas, pero en pacientes con insuficiencia
o signos de contracción del espacio vascular, se uti- renal avanzada (creatinina > 319 mmol/L) no han
liza plasma EV, 500 ml diarios o en días alternos sido sa- tisfactorias.
hasta aplicar 6 dosis, o albúmina humana libre de Antiagregantes plaquetarios. El dipiridamol en
sal, 50 a 100 ml igual que el plasma, seguido de la la dosis de 300 mg/d se ha empleado con
administración 2 o 3 h después de un bolo de frecuencia, aunque sus resultados son irregulares.
furosemida de 100 a 200 mg por vía EV; esto último Parecen ser más beneficiosos en la nefropatía por
debe hacerse con cautela en los pacientes con evi- IgA y en la membranoproliferativa.
dencias de disminución del volumen plasmático para Corticoides. Están indicados en el síndrome ne-
tratar de inducir una diuresis efectiva. frótico por lesiones glomerulares mínimas y en el
Otros medicamentos. Debido a que la proteinuria LED, y constituyen una alternativa terapeútica en
es la manifestación clínica siempre presente en las la glomerulosclerosis focal y segmentaria
diferentes enfermedades que cursan con un síndro- primaria. Están contraindicados en el síndrome
me nefrótico y un factor de riesgo en la progresión a nefrótico de la DM y de la amiloidosis. Se usa la
la insuficiencia renal crónica, se han utilizado múl- prednisona por vía oral en tabletas de 5 mg, en
tiples fármacos con vistas a disminuir o frenar aquella; dosis de 1 mg/kg de peso, sin pasar de 80 a 100 mg
así, en tiempos pasados se empleó la indometacina, al día durante 12 a 16 semanas; al cabo de este
la cual no ha demostrado alterar la evolución natu- tiempo se hace una valora- ción del paciente y,
ral de esta afección, además de exhibir riesgos po- según la respuesta que haya te- nido, se le
tenciales con su uso. En años más recientes, a los clasifica en esteroideosensible si ha
anticálcicos no dihidropiridínicos (diltiazem y ve- desaparecido la proteinuria, esteroideorresistente si
rapamilo) se han señalado efectos antiproteinúricos está presente y esteroideodependiente si la protei-
por su acción vasodilatadora de la arteriola eferente, nuria reaparece al suspender el tratamiento. En el
y en épocas actuales los IECA han probado su efica- primer caso, en el que generalmente se obtiene re-
cia, sobre todo en el síndrome nefrótico de la DM, misión a las 12 semanas, se retira la prednisona de
al reducir la proteinuria por disminución de la pre- forma gradual hasta suspenderla; en el segundo, de-
sión intraglomerular. finido como aquel que mantiene una proteinuria
De los IECA se utilizan el captopril, 12,5 mg, o nefrótica después de 4 meses de tratamiento con
el enalapril, 2,5 mg, al comenzar la terapéutica y se prednisona en dosis de 1 mg/kg peso/d, se pasa a la
va aumentando la dosis semanalmente con monitoreo terapéutica con inmunosupresores, y en el tercero
de la función renal en la 1ra., 2 da. y 4 ta. semanas; se puede mantener la terapeútica hasta 6 meses y de
si existiera un grado significativo de insuficiencia continuar la proteinuria, se comienza la administra-
renal (creatinina > 319 mmol/L) o hipercaliemia, de- ción de inmunosupresores.
119
Merece destacarse que en los pacientes añosos Otros inmunusupresores más recientes, ciclospo-
(más de 60 años de edad) se han observado remisio- rina A y tacrolimus, se han estado ensayando en el
nes completas con el uso del tratamiento esteroideo tratamiento de los pacientes con síndrome nefrótico
en doble dosis en días alternos (sin pasar de 100 mg), por lesiones glomerulares mínimas corticorresisten-
al comparase con adultos jóvenes con terapia tes y corticodependientes que no han tenido
esteroidea diaria. Al parecer, esta excelente respuesta respuesta al tratamiento con ciclofosfamida, y en la
al tratamiento está relacionada con la disminución glomeru- losclerosis focal y segmentaria primaria;
en el aclaramiento de esteroides que se observa con de ellos, el más usado es la ciclosporina A, un
la edad, que trae como consecuencia un efecto inhibidor selecti- vo de la interleuquina II, en dosis
de 5 a 6 mg/kg de peso/d, dividido en 2 dosis. Hay
esteroideo más sostenido en los enfermos añosos.
que dosificar los niveles plasmáticos de la droga y
Inmunosupresores. Encuentran indicación en las
tratar de mante- nerlos entre 100 y 200 mg/ml; si
situaciones antes mencionadas, en los casos con ci- no hay respuesta al tratamiento dentro de los
fras tensionales elevadas, en el LED, la periarteritis primeros 3 a 4 meses, debe suspenderse. La
nudosa y otras vasculitis. Los medicamentos más necesidad de mantener el tratamien- to largo tiempo
usados son: imurán (2 a 3 mg/kg de peso/d) y ciclo- (6 meses, 1 año o más) en caso de respuesta,
fosfamida (2,5 a 3 mg/kg peso/d). Esta última es la obliga a disminuir la dosis lo más posible para
droga que mejores resultados ha producido. Se ad- evitar la nefrotoxicidad de ésta y al seguimien- to
ministran por un período de 8 a 12 semanas, asocia- con biopsia renal percutánea cada 18 a 24 meses.
dos a bajas dosis de prednisona (0,25 mg/kg de Por último, deben tenerse en cuenta los numero-
peso/d) y deben suspenderse cuando la cifra de leu- sos efectos secundarios de los esteroides y los in-
munosupresores y valorar el riesgo-beneficio de su
cocitos sea inferior a 4 000/mm3 ( < 4 . 109/L).
uso en cada paciente, individualmente.
120
9

INFECCIONES URINARIAS
La infección bacteriana del tractus urinario es un Según su forma de comienzo pueden ser agudas
problema común en la práctica médica diaria, el cual y crónicas.
produce una diversidad de síndromes, con un com- The Food and Drug Administration ha recomen-
portamiento clínico, terapéutico y pronóstico que dado clasificarlas en no complicadas, complicadas
tiene variadas características atendiendo a los gru- y recurrentes. Una infección se considera
pos de edad, sexo, estados asociados y a factores de complicada cuando se sitúa en un tractus urinario
riesgo relacionados con hábitos de las personas, fun- estructural y funcionalmente anormal; es no
damentalmente en las mujeres. complicada cuando transcurre en un aparato urinario
El tractus urinario es estéril y sólo en la uretra normal. Las recurren- tes tienen lugar tanto en las no
anterior es posible encontrar una flora variable cua- complicadas como en las complicadas y se
litativa y cuantitativamente, según la edad, sexo y caracterizan por períodos asin- tomáticos, o
otros factores. infecciones que se repiten más de 3 ve- ces al año;
La uretra masculina está colonizada por estafilo- a su vez se clasifican como: recidiva
cocos, estreptococos y bacilos difteroides; son ra- (recurrencia con la misma cepa), reinfección (recu-
ras las enterobacterias, aunque sí frecuentes en el rrencia con bacteria diferente a la previa),
prepucio de los niños pequeños. La secreción pros- persisten- cia bacteriana ( aquella que se mantiene
tática es estéril, pero puede contaminarse al atrave- sin lograr la esterilidad del tractus urinario durante
sar la uretra. La flora bacteriana de la uretra y después del tratamiento) y superinfección
femenina, vagina y vestíbulo vaginal presenta (cuando se aísla un microrganismo adicional
lactobacilos (100 000 col o más/ml), estafiloco- durante el tratamiento antibiótico).
cos (100-10 000 col/ml), estreptococos y difteroides;
la colonización por enterobacterias (normalmente
entre 10 y 1 000 col/ml) es rara y de naturaleza tran-
sitoria.
PIELONEFRITIS
De acuerdo con los criterios de Kass, se conside- AGUDA
ra que hay infección en el tractus urinario cuando
se encuentran 100 000 col/ml de orina o más de un
germen; sin embargo, en la actualidad nuevas expe- Concepto
riencias han hecho recomendable hacer variaciones La pielonefritis aguda (PA) es la lesión que resulta
a criterios tan rígidos, y en ocasiones cuando existe de la colonización bacteriana del parénquima renal,
un obstáculo al libre flujo de la orina, se encuentran cálices y pelvis.
infecciones renales con urocultivos negativos.
Son múltiples las clasificaciones descritas de las Etiología
infecciones urinarias, pero es muy útil la división Hay que considerar dos factores: el huésped y los
en dos categorías anatómicas: altas, donde están gérmenes infectantes.
tomados el parénquima y la pelvis renal (pielone-
fritis), y bajas, cuando la afectación es fundamen-
Huésped
talmente vesical (uretritis, cistitis, prostatitis,
cistouretritis), si bien en este último caso la infec- Los lactantes y en especial los del sexo femenino,
ción tiende a ascender al riñón. desarrollan con alguna frecuencia brotes de
pielone- fritis; parece que la contaminación de los
genitales

121
con las heces fecales favorece el desarrollo de las Está ampliamente demostrado que no todas las
infecciones urinarias en estos casos. bacterias tienen igual capacidad para producir una
Entre los 20 y 40 años de edad la frecuencia de la infección del tractus urinario, y que la virulencia
enfermedad en el hombre y la mujer es de 1:10, lo del germen es un factor importante en la
cual se explica por la cortedad de la uretra femeni- patogénesis de la infección, pero la ocurrencia de
na, los traumatismos que esta sufre durante el coito ésta estará deter- minada por la confrontación entre
y el parto, la estasis urinaria que se produce durante los mecanismos de defensa del huésped y los
el embarazo y la fácil contaminación por las heces y factores que facilitan la virulencia del germen;
las secreciones vulvovaginales. entre estos últimos casos se encuentran:
Las obstrucciones de las vías urinarias a cualquier 1. La producción de ureasa, que promueve la for-
nivel que ocurran, sean mecánicas o funcionales, mación de los cálculos.
constituyen un factor importantísimo de desarrollo 2. La presencia de fimbrias P que contiene la E.
y paso a la recurrencia y cronicidad de una pielone- coli, las cuales permiten su adherencia al
fritis. La estrechez uretral, la fibrosis periuretral, la uroe- pitelio a través de los receptores de
próstata adenomatosa y el reflujo vesicoureteral son naturaleza lipoproteica.
procesos que provocan estasis urinaria y favorecen 3. La existencia de antígeno O en las cepas lisas
la colonización de los gérmenes en las vías uri- de E. coli, que la hacen más resistentes a la
narias. fagocitosis.
Existen otros factores del huésped que normal- 4. La producción de adhesinas y hemolisinas por
mente son mecanismos de defensa contra la coloni- las bacterias, que incrementa la persistencia
zación bacteriana del tractus urinario, que de estar de éstas con un mayor índice de adherencia y
alterados incrementan la susceptibilidad de éste a daño de las células del epitelio del tractus
las infecciones, como son: flora normal periuretral urinario.
(inhibe el crecimiento y adherencia de los gérme-
nes); el mecanismo de vaciamiento vesical frecuente Patogenia
que impide la multiplicación bacteriana; la presen- En la patogénesis de la PA se han propuesto dos
cia de la proteína Tamm-Horsfall, que previene con- vías fundamentales, la hematógena, con afectación
tra la adherencia de las bacterias; el pH ácido en la del riñón durante el curso de una bacteriemia
orina y la vagina, y la integridad de la mucosa hemató- gena; es responsable de menos del 3 % de
vesical. las pielo- nefritis y los organismos que reconocen
esta vía son: Staphylococcus aureus, diversas
Gérmenes especies de sal- monellas, Pseudomona
La mayoría de las infecciones del tractus urinario aeruginosa y las especies de cándidas.
son causadas por bacilos aerobios gramnegativos, Más del 95 % de las infecciones urinarias ocurren
que constituyen parte de la flora microbiana normal siguiendo la vía ascendente, sin duda alguna la más
del intestino. El microrgamismo más frecuente es aceptada por los investigadores. Los gérmenes lle-
Escherichia coli, que representa alrededor del 80 % gan al riñón provenientes de la vejiga infectada, la
o más de las infecciones urinarias; Klebsiella pneu-
que a su vez recibió las bacterias desde la uretra y
moniae, diferentes especies de proteus y los entero-
vías genitourinarias en la mujer, y desde la próstata
cocos siguen en orden de frecuencia. Los organismos
y uretra en el hombre.
grampositivos, estreptococos y estafilococos pióge-
nos son menos usuales. En pacientes hospitalizados El hecho de que los gérmenes encontrados en
la proporción de E. coli desciende a un 40 o 50 % y esta afección residan habitualmente en el
aumenta la de enterobacter, serratia, Morganella intestino, la mayor incidencia en la mujer, cuya
morgani, pseudomonas, acinetobacter y levaduras uretra es más corta que la del hombre, así como
(la más frecuente es la Candida albicans). una serie de tra- bajos en que se pone de
Si el enfermo está inmunosuprimido, gérmenes manifiesto la importancia de la higiene meticulosa
como las aeromonas, corynebacterium, mycobacte- genital femenina en el con- trol de las infecciones
rium y hongos pueden ser responsables de la in- urinarias, son elementos que apuntan a favor de la
fección. vía ascendente como respon- sable de la mayoría
de los casos de pielonefritis.
122
Escherichia coli. Principalmente los serotipos O4 profusa unas horas después de instalada o manteni-
y O6 son el patógeno más común del tractus urina- da con escasa remitencia. La cefalea con fotofobia
rio; esta bacteria posee factores de virulencia que muy molesta está presente en la mayoría de los ca-
incluyen los antígenos H, O y K, y fimbrias media- sos. El dolor dorsal o en ambas fosas lumbares es
doras de la adherencia a las células uroteliales. Las de intensidad variable, sordo, mantenido (con
fimbrias o pilis son filamentos proteicos que reco- sensibili- dad exquisita a la percusión del ángulo
nocen receptores específicos en las células uroteliales costo verte- bral), debido a la distensión de la cápsula
y están presentes en más del 90 % de los colibacilos renal causada por el edema intersticial producido
que causan pielonefritis; luego, las endotoxinas por por la infec- ción; se alivia poco con el reposo.
ella producidas disminuyen la motilidad uretral y Algunos pacien- tes aquejan también dolor en la
contribuyen con el proceso morboso. Una vez el ger- región suprapúbica. Los síntomas urinarios
men en el riñón, encuentra otros factores propicios generalmente presentes consisten en orinas
para su desarrollo; el tejido renal, particularmente turbias, disuria, polaquiuria y tenesmo de grado
la médula, presenta mayor susceptibilidad a las in- variable según el componente bajo de la infección,
fecciones por su pobreza en riego sanguíneo y tejido y en ocasiones hematuria. A menu- do se
reticuloendotelial; la movilización de los granuloci- acompaña también de taquicardia, malestar,
tos en la médula no es muy rápida y hay una actividad náuseas, vómitos, diarreas y cólicos abdominales.
anticomplemento debido a factores físicoquímicos En los niños menores de 5 años suelen haber sínto-
locales, como la hiperosmolaridad medular, que mas que no guarden relación directa con las vías
inhibe el poder bactericida del suero y crea condi- urinarias, como convulsiones tonicoclónicas gene-
ciones favorables para el crecimiento bacteriano. ralizadas que se deben al ascenso de la temperatura,
Anatomía patológica dolor abdominal y llanto con la micción.
En los ancianos postrados, crónicamente enfer-
Aspecto macroscópico
mos, hiponutridos, la pielonefritis se acompaña por
La PA no complicada no causa la muerte. En casos
lo común de un estado de shock.
examinados y experimentos en animales se ha en-
En el examen físico sólo aporta interés el dolor
contrado congestión venosa e inflamación de los
en las fosas lumbares y puntos pielorrenoureterales.
cálices y pelvis, la cual contenía orina purulenta y a
veces teñida de sangre; en las zonas de inflamación Exámenes complementarios
aguda se pueden hallar pequeños abscesos que rara Hemograma completo. Generalmente se encuentra
vez se rompen hacia el área perinefrítica, disemina- leucocitosis y desviación hacia la izquierda.
dos por la zona cortical, y otros de forma lineal si- Eritrosedimentación. Hay aumento de la eritro-
tuados en la médula; se encuentran, además, abscesos sedimentación globular.
en cuña con la base dirigida hacia la corteza y el Orina. Hay leucocituria (más de 10 leucocitos
vértice hacia la médula. por campo) y piuria; son frecuentes la albuminuria
y la cilindruria (cilindros leucocitarios,
Aspectos microscópico epiteliales y granulosos). Se puede encontrar
Se observan microabscesos en el parénquima renal, hematuria micros- cópica o macroscópica.
con acumulación de polimorfonucleares que pueden Urea y creatinina. Son por lo general normales,
estar dentro y fuera de la luz tubular en toda su lon- excepto cuando hay una afección renal previa o
gitud y alrededor del glomérulo. Este último mues- fac- tores prerrenales.
tra los cambios de una glomerulitis; el proceso tiende Conteo de Addis. Tiene valor en el seguimiento
a permanecer limitado dentro del segmento de teji- de la convalecencia; la albuminuria es inferior a 3
do renal afectado originalmente. g/L, las cifras de leucocitos habitualmente
superiores a 100 000/min y hay más de 3
Cuadro clínico cilindros/min.
Los síntomas en general se presentan con suma ra- Urocultivo. Permite identificar el germen causal
pidez en unas cuantas horas o en un día y son bas- y su sensibilidad a los antibióticos. Siempre debe
tante característicos: escalofríos con temblores, tomarse una muestra de orina antes de iniciar el tra-
fiebre elevada de 39 a 41ºC, seguida de sudoración tamiento y se evitará el cateterismo vesical; la
mues- tra adquirida de la porción media de la
micción, directamente en un frasco estéril de
boca ancha,
123
previa limpieza y desinfección del meato y los Son tres los criterios sobre los que se basa fuer-
genitales externos en caso de tratarse de una mujer, temente el diagnóstico de PA. El clínico, dado por
tiene el mismo valor que la obtenida por sonda. las manifestaciones clínicas, el microbiológico
El conteo de gérmenes adquiere valor diagnósti- (urocultivo positivo) y el que tiene en cuenta el se-
co de infección urinaria cuando es superior a 100 000 dimento urinario con presencia de leucocituria,
colonias/ml de orina, y cuando es inferior a 10 000, piuria, o bacteriuria; dos de ellos confirman el
se considera que la orina se ha contaminado. En- diag- nóstico.
tre 10 000 y 100 000 colonias todavía puede deber- En ocasiones los procesos abdominales agudos,
se a contaminación, pero el cuadro clínico en este sobre todo la apendicitis retrocecal o pelviana, se
caso debe presidir el criterio diagnóstico. acompañan de síntomas que hacen pensar en una
La muestra para el urocultivo se tomará preferi- infección de las vías urinarias; esta situación, que
blemente de la primera micción de la mañana, por- pone a prueba la pericia del médico, necesita de
que al permanecer en la vejiga durante la noche, la una historia cuidadosa del comienzo de los síntomas,
orina alcanza condiciones favorecedoras de la mul- bús- queda meticulosa de signos peritoneales y
tiplicación bacteriana, lo cual facilita el crecimiento disocia- ción de la temperatura axilar y rectal, si
de los gérmenes en los caldos de cultivo. Otra pre- no quiere cometerse un grave error.
caución que debe tenerse es la de sembrar la mues- Por lo general, con una buena historia clínica se
tra lo más rápido posible, pues el conteo es capaz de encuentra la orientación necesaria para resolver las
falsearse por proliferación bacteriana en la orina re- dudas diagnósticas mediante los exámenes comple-
cogida y dejada en la temperatura ambiente; de no mentarios adecuados.
sembrarse en el transcurso de 1 h, se guardará a 4ºC
no más de 24 horas. Complicaciones, evolución
Tinción de Gram en la orina. Puede ayudar en la y pronóstico
selección del antibiótico que se va a usar.
La PA por lo regular evoluciona hacia la desapari-
Ecocardiografía renal. Es recomendable hacer
ción de los síntomas. Con el tratamiento adecuado
ultrasonido diagnóstico a todos los pacientes de
y sin enfermedad renal o afección urológica
ambos sexos y de cualquier edad desde el primer
compli- cante (estasis, obstrucción urinaria), suele
episodio; permite conocer el tamaño renal y si exis-
curar sin producir daño renal permanente; las
ten dilataciones de sus cavidades por un factor
complicacio- nes son raras cuando no hay
obstructivo.
obstrucción, y las más importantes son: shock
Urograma descendente/ cistografía miccional.
séptico, que es la más grave, pionefrosis, abscesos
Sólo tiene indicaciones en los casos agudos que no
renales perinefríticos y la ne- crosis papilar,
responden a las medidas terapéuticas correctamente
frecuente en diabéticos.
indicadas y en los niños menores de 5 años para la
La persistencia de fiebre y leucocitosis sugiere la
detección temprana de anomalías del tractus urina-
presencia de obstrucción del flujo de la orina por
rio, sobre todo el reflujo vesicoureteral.
cálculos u otros medios mecánicos que deben ser
Diagnóstico detectados por un examen urológico completo para
El diagnóstico resulta por lo general fácil cuando el su corrección, si fuera posible.
cuadro clínico es típico; los exámenes complemen- En mujeres sin obstrucción, la recurrencia se
tarios mencionados, y sobre todo el urocultivo, son debe a reinfección con una nueva cepa bacteriana;
concluyentes. A veces los síntomas y signos son poco el exa- men de vigilancia frecuente de la orina del
aparentes y el estado del enfermo no le permite ex- paciente es esencial para el tratamiento.
presar las molestias que aqueja. En estos casos, un El pronóstico de una PA depende de las
urocultivo positivo con orina patológica o sin ella condicio- nes generales del paciente (enfermedades
debe tomarse en consideración, sobre todo si no se previas y locales de sus vías urinarias). La dolencia
demuestra otra localización del proceso infeccioso; puede cu- rar sin secuelas, conducir a la muerte o
si hay antecedentes de cateterismo vesical, o enca- pasar a la cronicidad.
mamiento prolongado, el diagnóstico de pielonefri- La mayor parte de las infecciones urinarias pre-
tis cobra fuerzas. sentan una morbilidad limitada y una buena
respuesta a la terapéutica; sin embargo,
infecciones inocuas
124
en pacientes de alto riesgo, como niños, mujeres 2. Alcanzar una alta concentración en la orina.
embarazadas o portadores de catéteres, pueden tener 3. Poseer una vida media larga para mayor inter-
una alta morbilidad. Del mismo modo, las infeccio- valo entre las dosis.
nes causadas por bacterias virulentas o en enfermos 4. Tener poco o ningún efecto colateral.
inmunocomprometidos o en un aparato urinario pa- 5. Ser de bajo costo.
tológico, con frecuencia son difíciles de tratar y es- 6. No ofrecer peligro durante el embarazo y
tán asociadas a graves complicaciones. tener mínimos efectos sobre la flora normal de
Tratamiento la va- gina y la uretra.
Pueden utilizarse los siguientes, por vía oral:
Todo paciente con una PA debe ser ingresado, y su
tratamiento perseguir los siguientes objetivos: erra-
• Sulfaprim (trimetoprim – sulfametoxazol)
(fór- mula compuesta, con 80 y 400 mg,
dicar la infección, eliminar los síntomas y evitar las
respecti- vamente), 4 a 8 tabletas diarias (2
recurrencias y la lesión renal persistente.
a 4 tab cada 12 h); no usar en el embarazo.
El enfermo debe guardar reposo en cama y
administrársele analgésicos y antipiréticos para com- • Ampicillín, 500 mg cada 6 h.
batir el malestar, la fiebre y el dolor si fuera muy
• Trimetoprim, 100 mg cada 12 h en caso de
aler- gia a las sulfas.
intenso; son útiles: la aspirina, en dosis de 2 a 4 g, la
papaverina, de 20 a 40 mg por vía oral o IM y • Nitrofurantoína, 100 mg cada 8 h; es efectiva
avacina + dipirona (Espasmaforte, Avafortán), di- contra gérmenes gramnegativos, a excepción
rectamente por vía EV disuelto en 10 ml de dextro- de proteus y pseudomonas.
sa al 5 %, o también 2 ámpulas en 500 ml de • Cefalexina, 500 mg cada 6 h.
dextrosa al 5 %, que se administran en 4 o 6 h; este • Amoxicillín, 500 mg cada 8 h.
último con muy buenos resultados para combatir el • En caso de que se sospeche una infección por
dolor. El uso de los AINE por vía IM o EV proteus, se debe iniciar el tratamiento con áci-
constituye una alternativa. do nalidíxico, que es una quinolona, en la do-
El aporte de líquidos debe ser liberal y supe- sis de 2 a 4 g/d (0,5 a 1 g cada 6 h).
rior a 2 L/d, y en caso de vómitos, coma o cualquier • Recientemente han surgido quinolonas orales
otra circunstancia que impida o dificulte su inges- que son también un arma eficaz en el
tión, se administra por vía parenteral en cantidad tratamien- to de la PA, entre ellas:
de 3 000 a 4 000 ml en 24 h; con esta medida se • Norfloxacina, 200 a 400 mg cada 12 h.
pretende garantizar una diuresis de 1 500 ml o más • Ciprofloxacina, 250 a 500 mg cada 12 h.
por día. • Ofloxacina, 200 a 400 mg cada 12 h.
Debe instituirse tratamiento antibiótico empírico Muy efectivas contra las pseudomonas, pero
contra los gérmenes urinarios sospechados, previa no así contra los estreptococos y anaerobios
toma de las muestras necesarias para cultivos de orina como Bacteroides fragilis; no deben usarse
y sangre, según oriente el cuadro clínico. La tinción en el embarazo por las potencialidades de
de Gram en la orina suele ayudar en la selección del produ- cir daño fetal.
antibiótico empírico hasta obtener los resultados de Los antibióticos parenterales están indicados desde
los cultivos de orina, para establecer un tratamiento el comienzo en pacientes con severidad en el cuadro
más selectivo y específico. clínico con signos de toxinfección, en añosos,
El tratamiento antibiótico por vía oral debe ser diabéti- cos, embarazadas o con condiciones
reservado sólo para pacientes jóvenes con una in- favorecedoras de complicaciones (obstrucción,
fección adquirida ambulatoriamente y sin compli- malformaciones urológicas, inmunosuprimidos e
caciones, enfermedades asociadas o subyacentes, hiponutridos); las opciones del tratamiento
conocidas o sospechadas. Al escoger el antibiótico, incluyen:
se deben tener en cuenta una serie de características • Sulfaprim (ámpulas de 480 mg), 2 ámpulas cada
que lo hacen ideal para tratar la pielonefritis, como: 12 h, EV.
• Ciprofloxacina, 400 mg EV, cada 12 h.
1. Tener actividad contra gérmenes grampositi- • Ofloxacina, 400 mg EV, cada 12 h.
vos y gramnegativos. • Ceftriaxona, 1 o 2 g/d, vía EV.
• Ampicillín, 1 g EV cada 6 h, asociado a genta-
micina, 1 a 3 mg/kg de peso, o amikacina, 10
125
o 15 mg/kg de peso, cuando se sospecha un do y mantenido por gérmenes alojados en el parén-
enterococo. quima renal.
• Ticarcilina + ácido clavulánico, 3,2 g EV cada 8
h. Etiopatogenia
• Imipenem-Cilastatín, 500 mg EV cada 8 h. Prácticamente no se discute que la vía ascendente
• Aztreunán, 1 g EV cada 8 o 12 h. es la única responsable de la llegada y
mantenimiento de microrganismos en el
Si en el urocultivo con antibiograma se demues- parénquima renal; en la mayoría de los pacientes
tra sensibilidad a la droga empleada y hay mejoría con PC la infección bacte- riana se ha superpuesto
clínica ostensible, se mantiene el mismo tratamien- a una anomalía anatómica del tractus urinario, a
to impuesto. De suceder lo contrario, que el enfer- una obstrucción urinaria o, de manera más
mo no mejora y hay sensibilidad del germen a otra
frecuente, en ausencia de una anorma- lidad del
droga, se hacen los cambios pertinentes. En caso de
tractus urinario, a un reflujo vesicoureteral
discordancia, es decir, una mejoría incuestionable,
subyacente.
pero antibiograma con diferente sensibilidad, se con-
Se ha demostrado la importancia fisiopatogénica
tinúa con el tratamiento inicial.
Los antibióticos se mantienen por 15 días; la te- del reflujo vesicoureteral en el desarrollo y mante-
rapéutica parenteral debe proseguirse hasta que el nimiento de la PC. La acción de la hiperpresión re-
paciente esté estable y hayan pasado de 24 a 48 h trógrada con reflujo pielointersticial asociado a la
sin fiebre, para cambiar a los antibióticos orales y sepsis, constituye el mecanismo que explica la for-
completar las 2 semanas de tratamiento, siempre eva- mación de las cicatrices renales típicas de esta enti-
luando cada caso en particular, sus antecedentes y dad; es por ello que se denomina nefropatía de
los beneficios y riesgos. Tres días después de sus- reflujo. Este último puede ser consecuencia de una
pendido el tratamiento se realiza un nuevo uroculti- obstrucción del tractus urinario inferior o presentar-
vo; de ser positivo, se repiten las medidas específicas se sin obstrucción, en cuyo caso se denomina reflu-
durante otros 15 días y se realiza otro urocultivo en jo primario.
la misma forma; si fuera nuevamente positivo, se
debe ordenar un urograma descendente. El fracaso Anatomía patológica
de respuesta al tratamiento tras 48 o 72 h después de Aspecto macroscópico
instituido, exige una evaluación sonográfica y, si fue- Los riñones son pequeños y presentan cicatrices su-
ra necesario, radiológica profunda para identificar perficiales en forma de U; la corteza está estrecha-
factores obstructivos (litiasis, anormalidades anató- da, hay áreas nodulares que corresponden a túbulos
micas) que puedan complicar o enlentecer la evolu- dilatados y la mucosa de la pelvis y de los cálices
ción e impedir una rápida respuesta a la terapéutica. aparece congestiva.
Mensualmente se hace un urocultivo; después de 3
urocultivos consecutivos negativos, examen de ori-
Aspecto microscópico
na y conteo de Addis normales, se considera al pa-
Histológicamente los túbulos están dilatados y con-
ciente curado.
tienen material coloide en su interior, por lo que re-
PIELONEFRITIS cuerdan el flóculo tiroideo, de ahí su denominación
de “campos estrumosos”. Hay infiltración de célu-
CRÓNICA las redondas (linfocitos, células plasmáticas) y teji-
do fibroso que engloba a los túbulos en grado
Concepto variable; las arteriolas y las arterias muestran cam-
Se define como pielonefritis crónica (PC) una infla- bios degenerativos de endarteritis crónica que a ve-
mación del riñón, al inicio tubuloinstersticial, pero ces conducen a la trombosis; están presentes
que secundariamente afecta a los vasos y los glo- también los cambios vasculares de la hipertensión
mérulos, y da lugar a un riñón atrófico, pequeño, arterial. Al igual que en la variedad aguda, estas
retraído, con un daño cicatrizal ostensible provoca- alteraciones son focales, en parches.
En ocasiones el cuadro histológico se enriquece
con las modificaciones que le imprime la inflama-
126
ción aguda, la que luego cede su paso a la fibrosis e la identificación del germen y la elección del anti-
infiltración de células redondas, con extensión del biótico más efectivo.
proceso a otras zonas. Estudios radiológicos contrastados. Sólo los es-
tudios radiológicos demuestran las alteraciones
Cuadro clínico ana- tómicas relativamente específicas utilizadas
La PC adopta en la práctica diversas formas clíni- como criterios diagnósticos de una PC: la presencia
cas, de las cuales la más importante y a la vez más de ci- catrización focal en la corteza y el
frecuente es la relacionada con la infección, con ata- ensanchamiento y la deformidad calicial
ques agudos recurrentes: fiebre, dolor lumbar, pola- subyacente. El riñón afec- tado es pequeño,
quiuria y bacteriuria, que en ocasiones puede ser atrófico, con muescas y abolladu- ras en la corteza,
asintomática; otra forma es la que cursa con hiper- que está disminuida, hay diferencia de tamaño
tensión arterial, en la cual tiene un valor extraordi- entre ambos órganos e hidronefrosis de diverso
nario que la afectación renal sea unilateral por la grado.
posibilidad de solución quirúrgica. Biopsia renal. Tiene un valor limitado si no se
Existe otra forma clínica que está relacionada con valora con la clínica y los exámenes complementa-
la extensión y localización de la lesión intrarrenal, rios, principalmente los radiológicos.
con alteraciones resultantes de la afectación tubu- pH urinario. Siempre tiende hacia los valores
lar, que incluyen la incapacidad para conservar el neutros o alcalinos; con una sobrecarga de ácido
sodio, disminución de la capacidad de concentra- (clo- ruro de amonio), muchas veces el riñón
ción urinaria y tendencia a la hipercalcemia y a la pielonefrítico no logra un pH urinario inferior a
acidosis, que se traducen en un cuadro de insufi- 5,3, de lo cual resulta una orina alcalina, es decir,
ciencia renal crónica con poliuria, sed intensa, ca- una acidosis re- nal tubular.
lambres y astenia marcada.
Evolución, complicaciones
Exámenes complementarios y pronóstico
Los hallazgos de laboratorio son tan inesperados Están condicionados a los accidentes que la hiper-
como los clínicos. tensión arterial, en caso de cursar con ésta,
Orina. Tiene baja densidad; hay leucocituria, con ocasione sobre los órganos diana (corazón, riñón y
cilindruria y albuminuria. vasos san- guíneos), a las posibilidades de
Conteo de Addis. La albuminuria es menor de 3 g/L, corrección quirúrgi- ca de los factores
hay leucocituria superior a 100 000/min, microhe- predisponentes y al control que pueda ejercerse
maturia y cilindros leucocitarios; la cilindruria es sobre la insuficiencia renal crónica una vez
superior a 3/min. establecida y sobre las infecciones.
Filtrado glomerular. Se afecta poco hasta los es- Tratamiento
tadios finales y siempre en desproporción en rela-
El tratamiento va dirigido a suprimir la infección y
ción con la disfunción tubular.
prevenir su recurrencia. Se hace necesario corregir
Capacidad de concentración. Se altera precoz-
los factores anatómicos contribuyentes y tratar pre-
mente y está disminuida.
cozmente las complicaciones.
Electrólitos en la sangre y orina. Generalmente
En general, la conducta terapéutica está en rela-
hay hipocalcemia, pero en ocasiones se desarrolla
ción con el grado de insuficiencia renal, en caso de
un hiperparatiroidismo secundario que lleva los ni-
existir, que presente el paciente. Se reportan buenos
veles de calcio a cifras normales o elevadas. La
resultados en el control de las infecciones con trata-
natriuria puede estar aumentada y producir una
miento antibiótico a largo plazo, de 6 meses a 2
nefritis perdedora de sal. Otras veces es la caliuria
años o más, en dosis única y baja a la hora de
lo que se incrementa de forma exagerada por hiperal-
dormir.
dosteronismo secundario y se constituye una nefritis
El paciente debe ser chequeado mensualmente, y
perdedora de potasio.
las recidivas y superinfecciones tratadas de forma
Urocultivo. Es positivo en el 40 o 50 % de los
enérgica de acuerdo con la sensibilidad del germen
casos. Cuando se presenta un ataque agudo, permite
en el antibiograma. Algunas formas clínicas de la
PC presentan alteraciones electrolíticas; el tratamien-
to será el sustitutivo del electrólito en déficit.
127
10

INSUFICIENCIA RENAL CRÓNICA


Concepto i) Cistinosis, oxalosis.
j) Anemia drepanocítica.
La insuficiencia renal crónica (IRC) es la pérdida
lenta y progresiva de las funciones renales, de ca- Epidemiología
rácter irreversible, y la resultante final de un grupo
de nefropatías. En ocasiones, estas enfermedades Estudios realizados en nuestro país coinciden con
tienen una base inmunitaria y el desarrollo de la afec- otros en Estados Unidos y Latinoamérica, como
ción se debe a la persistencia de estos mecanismos Bra- sil, Perú y Puerto Rico, donde son cuatro las
inmunológicos; en otros casos se postula la presen- enfer- medades que con mayor frecuencia
cia de mecanismos autoinmunes secundarios inicia- producen daño renal: hipertensión arterial (HTA),
dos en un tejido renal previamente alterado. Se ha diabetes mellitus
demostrado, además, que la reducción de la masa (DM), glomerulopatías crónicas y riñones
renal produce lesiones estructurales en las nefronas poliquísticos. El predominio de una u otra varía en
remanentes, que las lleva de manera progresiva ha- dependencia del país e incluso del área poblacional
cia una esclerosis total. Su expresión clínica com- estudiada, lo que está en relación con la raza. Así,
prende síntomas de la enfermedad que la causó y en Cuba se han realizado varias investigaciones;
manifestaciones propias de la pérdida de las funcio- por ejemplo, en Santiago de Cuba predomina la
nes renales. HTA como causa de IRC, le sigue en orden de
frecuencia las glomerulopatías, luego la DM y el
Etiología riñón poli- quístico; mientras que en otras zonas
de la isla la DM es la principal.
La IRC puede deberse a enfermedades primarias y
En los Estados Unidos, las causas más frecuentes
secundarias del riñón:
de IRC son la DM y la HTA, y esta última es, a su
1. Nefropatías primarias:
vez, la que más se presenta en el sur de ese país,
a) Glomerulopatías crónicas. b)
donde predomina la raza negra.
Nefritis intersticial crónica. c)
En Cuba, debido a a la atención médica existente
Nefropatías obstructivas.
y a los programas de salud establecidos con el
d) Riñones poliquísticos.
médi- co de la familia, se ha logrado la
e) Nefritis hereditaria (Alport).
dispensarización de un grupo de enfermedades
f) Nefronoptisis.
crónicas como la HTA y la DM, lo que permite
g) Hipoplasia renal.
que se realice un adecuado control y seguimiento
h) Tubulopatías crónicas congénitas.
de estos pacientes, se lleve a cabo un mejor
2. Nefropatías secundarias:
tratamiento y, por tanto, se prevenga el daño renal.
a) Hipertensión arterial.
Por otro lado, si se ha establecido el daño renal, se
b) Diabetes mellitus.
pueden instituir medidas terapéuticas adecuadas
c) Lupus eritematoso diseminado.
para evitar o enlentecer la progresión de la
d) Angeítis.
enfermedad.
e) Amiloidosis primaria y secundaria.
f) Nefropatías producidas por drogas. Anatomía patológica
g) Púrpura trombocitopénica trombótica.
h) Hiperparatiroidismo primario. Aspecto macroscópico
Las piezas obtenidas de nefrectomías realizadas en
pacientes que recibieron un trasplante renal, permi-

128
tieron a Heptinstall crear el término de riñón en es- número de nefronas, es el péptido atrial natriuréti-
tadio terminal. Se trata de riñones que desde el pun- co, que contribuye a la elevación del IFG de la
to de vista macroscópico son muy pequeños y nefrona remanente. En los segundos, que concierne
usualmente pesan entre 80 y 90 g; al corte no se a la alteración en la estructura y función de los
puede apreciar el límite entre la corteza y la médula. túbulos, se produce un mecanismo de hipertrofia
renal compensadora que consiste en cambios
Aspecto microscópico bioquímicos y presencia de factores de crecimiento
Cuando la IRC es reciente, el riñón presenta el as- (hormona renotrófica). Según la hipótesis de las ne-
pecto histopatológico característico de la enferme- fronas que se adaptan de modo significativo en el
dad que la originó. Si, por el contrario, se trata de un curso de la uremia crónica, se logra mantener así el
paciente con insuficiencia renal muy avanzada, en- balance glomerulotubular hasta etapas avanzadas
de la enfermedad. De esa forma tiene lugar un
tonces los hallazgos anatomopatológicos no permi-
aumento en la excreción de sodio y con ello la
ten establecer en la mayoría de los casos qué tipo de
regulación del volumen del espacio extracelular, así
dolencia ocasionó la merma de las funciones rena- como un incre- mento en la excreción de agua y,:
les. En el examen con el microscopio óptico, los glo- en consecuencia, la regulación de la tonicidad del
mérulos aparecen totalmente esclerosados y los líquido corporal.
túbulos, atróficos, y existe un marcado aumento del Todos estos mecanismos de adaptación secunda-
tejido conectivo. Se puede observar un infiltrado in- rios a la reducción del número de nefronas, tienen
flamatorio de células redondas (linfoplasmocitarias). un precio biológico final, que no es más que el
Fisiopatología dete- rioro de las nefronas remanentes adaptadas,
con el consiguiente daño glomerular y
Como se ha expresado en capítulos anteriores, las
tubulointersticial, que contribuye a la progresión
funciones del riñón son múltiples y, entre ellas, la
de la insuficiencia renal.
de eliminar las sustancias de desecho quizás sea la
Acorde con lo explicado anteriormente, se dedu-
menos significativa. Existen otras de extrema im-
ce que por los mecanismos de adaptación de las ne-
portancia como son la del control de la homeostasis,
fronas (según hipótesis de Bricker), se logra
la regulación de la presión arterial y la función para
eliminar la carga de catabolitos proteicos por un
la liberación de hormonas, como la eritropoyetina,
lado, y por otro se reajusta el metabolismo del
metabolitos activos de la vitamina D, como lo es
sodio, potasio y agua, mecanismo que se va
la 1,25 (OH) 2 colecalciferol, prostaglandinas, etc.,
perdiendo en períodos avanzados de la
capacidades que se van perdiendo a medida que va
enfermedad. A pesar de ello, la ca- pacidad de
disminuyendo la función renal, o sea, la tasa de fil-
concentración de la orina se pierde en etapas
tración glomerular; sin embargo, la reducción de es-
tempranas, razón por la cual aparece la poliuria
tas funciones sólo comienza a hacerse evidente
isosmótica.
cuando la filtración glomerular ha descendido por
Cuando el filtrado glomerular cae por debajo
debajo de 30 ml/min, y es totalmente manifiesta
de 30 ml/min, estos mecanismos de compensación
cuando dicha filtración cae por debajo de 15 ml/min.
comienzan a fracasar, el equilibrio homeostático se
Cuando se produce una agresión al riñón, ya sea
torna cada vez más precario y entonces se hace más
inmunológica o no, se daña la nefrona, que es la es-
evidente la retención de azoados, así como la inca-
tructura anatomofuncional del órgano; tiene lugar
pacidad de manejar el ion hidrógeno, lo que se ex-
entonces un proceso de adaptación secundario a la
presa por una acidosis metabólica, ya que en esta
reducción del número de nefronas, lo que conduce a
fase la amoniogénesis y la acidificación de tampo-
alteraciones en la estructura y función del gloméru-
nes se perturban por la reducción del número de ne-
lo y de los túbulos. En el primero, por un aumento
fronas.
del índice de filtración glomerular (IFG) y altera-
ciones del flujo renal en dicha estructura, que no es Ya en esta etapa de la afección, el riñón no es
más que la hiperfiltración e hipoperfusión glomeru- capaz de mantener el equilibrio fosfocálcico por la
lar; aquí, el candidato más promisorio entre las hor- incapacidad de sintetizar 1,25 (OH)2 colecalciferol,
monas vasomotoras, después de la reducción del y comienzan a aparecer las manifestaciones propias
de la hipocalcemia e hiperfosfatemia y el
hiperpara- tiroidismo secundario. También en este
momento se
129
hace más evidente la anemia, por la cada vez más Cuadro clínico
deficiente producción de eritropoyetina, y aunque La IRC es una enfermedad de evolución lenta y
es el factor más importante, existen otros, como el
pro- gresiva, y a veces pasan años antes que el
trastorno en la incorporación del hierro a la molécu-
paciente llegue a la fase terminal o etapa en que es
la de protoporfirina; en algunos pacientes se presen-
necesaria la diálisis. Si se unen las
ta, además, una anemia hemolítica microangiopática.
manifestaciones clínicas con los valores de
Ya en enfermos en régimen dialítico se asocian otras
creatinina sérica y el IFG, se la puede clasificar en
causas, como la pérdida de folatos, hierro, vitamina
B12 y de sangre en las máquinas, y en las extraccio- cuatro grados.
nes para evaluación humoral.
Insuficiencia renal crónica de grado 1
La presencia de HTA se explica por dos mecanis-
Sólo están presentes las manifestaciones de la en-
mos fundamentalmente: el exceso de volumen por
fermedad de base que la produce y desde el punto
mal manejo del agua y el sodio, y el de angiotensina de vista humoral se encuentra una creatinina sérica
y aldosterona, por la exagerada producción de reni- superior a 1,2 mg % y menor de 2 mg % (>106
na. Los inhibidores de la enzima convertidora de la y <176,8 mmol/L) y un IFG entre 80 y 50 ml/min.
angiotensina controlan con eficacia la HTA en la IRC
y pueden utilizarse en tanto la hipercaliemia no sea Insuficiencia renal crónica de grado 2
un problema. Todavía en esta etapa no hay manifestaciones clíni-
Cuando el IFG disminuye por debajo de 15 ml/min, cas de IRC y desde el punto de vista humoral el pa-
los mecanismos de adaptación de la nefrona son ya ciente tiene una creatinina sérica entre 2 y 5 mg %
casi imposibles; se agrava la anemia, se presenta la (entre 176,8 y 442 mmol/L) y un IFG entre 50
osteodistrofia renal, producto de los trastornos del y 30 ml/min.
fósforo y el calcio secundarios al déficit de metabo-
litos activos de la vitamina D, y aparece el hiper- Insuficiencia renal crónica de grado 3
paratioidismo secundario. Es muy frecuente la Es en este período que comienzan las alteraciones
retención hidrosalina, manifestada por la expansión propias de la disminución de las funciones renales
del espacio extracelular (HTA, edemas, estasis pul- y aparece poliuria con nicturia. Puede haber una
monar) debido al mal manejo del agua y el sodio, pér- dida renal exagerada de sodio y en otras
que en algunos pacientes es más marcado que en oportuni- dades se presenta una HTA. La anemia
otros y se nota por la presencia o no de diuresis resi- normocítica normocrómica es en ocasiones el signo
dual, que muchas veces está relacionada con la en- más llamati- vo. Y es en esta fase, llamada también
fermedad causante de la IRC. predialítica, que empieza a producirse el
En esta fase también se agrava la acidosis meta- desequilibrio fosfocál- cico (hiperfosfatemia e
bólica crónica por la imposibilidad del riñón para hipocalcemia). Desde el pun- to de vista humoral, la
manejar los iones hidrógeno y potasio, las concen- creatinina sérica está entre 5 y 10 mg % (442 y
traciones séricas de bicarbonato oscilan entre 12 884 mmol/L) y el IFG entre 30 y 15 ml/min.
y 15 meq/L, la brecha aniónica está aumentada y,
aparejado a ello, se produce una hipercaliemia, más Insuficiencia renal crónica de grado 4
En esta etapa el riñón ya no es capaz de mantener
marcada en los pacientes oligoanúricos.
sus funciones y evidencian más los síntomas del
La retención de sustancias tóxicas en esta fase,
gra- do anterior; aparecen astenia, palidez
que reciben el nombre de toxinas urémicas y son
cutaneomu- cosa y un tinte terroso en la piel.
producto del metabolismo de las proteínas (urea, Suele haber abotagamiento facial y edema en los
guanidina, arginina) y del metabolismo bacteriano miembros in- feriores como expresión de la
(toxinas exógenas ingeridas o sintetizadas por bac- retención hidrosalina, y en muchos pacientes se
terias intestinales), son las responsables de las ma- observa una hipertensión de difícil control.
nifestaciones digestivas y dermatológicas, de los Surge el aliento urémico, así como anorexia,
trastornos de la circulación de la sangre y de las náu- seas y vómitos. El insomnio es frecuente y en
manifestaciones de polineuropatía periférica. oca- siones se presentan sensaciones de quemazón
en las plantas de los pies como expresión de una
polineu-
130
ropatía. Son evidentes la acidosis metabólica, la hipo- 5. Trastornos de la coagulación. Se explica que
natremia dilucional y la hipercaliemia, así como la un daño en el endotelio de los capilares glo-
hipo- calcemia e hiperfosfatemia. Desde el punto de merulares, especialmente cuando se asocia a
vista humoral la creatinina sérica es mayor de 10 hipertensión intraglomerular, favorezca la adhe-
mg % sión de las plaquetas y se desencadene por vía
(>884 mmol/L) y el IFG está por debajo de 15 ml/min. intrínseca la activación de la cascada de la
Una vez alcanzada esta etapa, el paciente necesi- coa- gulación.
ta el tratamiento sustitutivo de la función 6. Estimulación de factores de crecimiento hístico.
renal Se plantea que en la IRC circulan en el plasma
(diálisis peritoneal o hemodiálisis) y drogas como factores que promueven el crecimiento glo-
eritropoyetina recombinante humana, 1,25 (OH) 2 merular, o sea, sustancias que determinan un
colecalciferol, antianémicos, etc. aumento del material mesangial, lo que evolu-
Hay algunos factores que pueden agravar una IRC ciona hacia la obliteración de los capilares
no terminal, como son: glo- merulares.
7. Perturbaciones inmunológicas. Además de la
1. HTA acelerada o grave. presencia de mecanismos inmunológicos en
2. Desequilibrios hidroelectrolíticos. aquellas enfermedades renales de este origen,
3. Sepsis. también se ha confirmado la existencia de in-
4. Obstrucción urinaria. munoglobulinas del tipo IgM en los gloméru-
5. Uso de drogas nefrotóxicas. los de nefronas remanentes, lo que parece
6. Factores metabólicos, como es el aumento de generar una respuesta inmune directa contra
los productos fosfocálcicos que causan calcifi- an- tígenos renales.
cación de los tejidos blandos.
Pudiera decirse que los mecanismos adaptativos
Todos son epifenómenos, que una vez controla- del riñón en la IRC, que facilitan la aparición de los
dos permiten el restablecimiento de los mecanismos factores de progresión antes mencionados, se
compensatorios ya explicados. imbri- can y dan lugar a la siguiente secuencia
Existen otros factores que favorecen la progre- lesional en el órgano:
sión del daño renal, como son:
1. Daño endotelial, que a través de la acción
1. Persistencia de la actividad de la enfermedad plaquetaria favorece la trombosis intraglomeru-
de base. lar, la liberación de factores de crecimiento y
2. Cambios hemodinámicos por aumento de la pre- fibrosis.
sión intraglomerular asociada o no a HTA, lo 2. Formación de microaneurismas, que coadyuvan
que favorece la esclerosis glomerular. a los cambios reseñados anteriormente.
3. Anormalidades metabólicas. Existen también 3. Aumento de la actividad macrofágica con
variaciones en los segmentos tubulares de las libe- ración de factores de crecimiento, que
nefronas, con el objetivo de mantener el equi- inducen la expansión mesangial y hialinosis.
librio glomerulotubular. Estos cambios consis- 4. Incremento del tráfico mesangial de
ten en un incremento en la amoniogénesis, lo macromo- léculas, que aumentan la expansión
que origina un mecanismo de daño renal al ac- mesangial.
tivarse la vía alternativa del complemento y ge-
nerar factores quimiotácticos y citolíticos que Si el paciente no recibe tratamiento dialítico
causan una inflamación tubulointersticial, me- cuan- do arriba al grado 4 de IRC, empieza a
canismo que se agrava por el depósito de sales desarrollarse el denominado síndrome urémico,
de calcio y urato. La hiperuricemia, hiperfos- que consiste en el agravamiento de todos los
fatemia y la hiperlipoproteinemia son otros fac- síntomas y signos de la uremia, y la aparición de
tores que favorecen la progresión del daño las complicaciones de los diferentes órganos y
renal. sistemas por acción de las toxi- nas urémicas por
4. Alteraciones endocrinas. Entre ellas se plan- una parte y por el desequilibrio hidroelectrolítico
tean las del metabolismo fosfocálcico y la hor- por otra. Comienzan a presentarse las alteraciones
mona paratiroidea, así como la tiroidea y la neurológicas centrales y periféricas,
insulina, que aceleran la progresión de la IRC.
131
que van desde el estupor hasta el coma vigil y con- El ultrasonido resulta ser un estudio relevante,
vulsiones, así como subsaltos tendinosos y otras no sólo por los datos morfológicos característicos
manifestaciones de irritabilidad neuromuscular y que brinda, sino también porque es totalmente
signo de Babinski; también alteraciones de la sensi- inocuo.
bilidad. Los valores plasmáticos de urea y creatinina tie-
Los vómitos y las diarreas son frecuentes y en nen importancia en el seguimiento evolutivo de los
ocasiones tiene lugar una hematemesis, que hace pacientes con esta afección.
pensar en el desarrollo de una úlcera péptica o una El ionograma y la gasometría arterial ofrecen
gastritis urémica. En el aparato cardiovascular se ins- información sobre el estado del metabolismo hidro-
tala o se agrava la insuficiencia cardíaca ya existen- electrolítico y del ion hidrógeno.
te, que adoptan la forma de edema agudo del pulmón La dosificación del calcio y el fósforo plasmáti-
o de una insuficiencia cardíaca congestiva. La apa- cos sirven para valorar la intensidad del
rición de dolor precordial, con roce pericárdico o
hiperparati- roidismo.
sin él, permite plantear la pericarditis urémica. En
Los exámenes bacteriológicos de orina constitu-
esta etapa avanzada, el prurito y la tendencia al san-
yen una indicación obligatoria en el estudio de
gramiento son también manifestaciones comunes. La
estos pacientes.
“escarcha urémica” es un signo raro en el momento
actual por el desarrollo de la terapéutica. La biopsia renal percutánea sólo podría ser útil
Generalmente el volumen urinario está muy dis- en el grado 1 de IRC y en algunos casos para esta-
minuido y es frecuente la oligoanuria. blecer el diagnóstico etiológico, ya que en etapas
La acidosis metabólica y la hipercaliemia consti- más avanzadas del síndrome no es posible por las
tuyen las alteraciones bioquímicas más graves y son lesiones histológicas crónicas ya establecidas, que
a menudo causa de muerte. Las alteraciones humo- no permiten identificar una entidad determinada.
rales descritas en la etapa anterior son mucho más Tratamiento
graves. Día tras día aumentan los niveles plasmáticos El tratamiento de la IRC requiere de una atención
de urea, creatinina, ácido úrico y otras sustancias médica integral y tiene un enfoque eminentemente
derivadas del catabolismo proteico, como expresión
preventivo, que debe comenzar en el nivel de aten-
de la incapacidad total del riñón para eliminar los
ción primaria, seguir en la secundaria y, por último,
productos de desecho.
en la terciaria.
Diagnóstico
Nivel primario
En las primeras etapas evolutivas, el diagnóstico de
Aquí el papel del médico de la familia es
la IRC sólo puede realizarse con la ayuda de los exá-
fundamen- tal, porque se desenvuelve a nivel de
menes de laboratorio, fundamentalmente la medi-
ción del IFG utilizando el método de aclaramiento toda la pobla- ción. Sus objetivos son los
de la creatinina endógena o el del aclaramiento de la siguientes:
inulina. En fases avanzadas, las manifestaciones clí- 1. Prevenir el desarrollo de la enfermedad renal.
nicas permiten establecer el diagnóstico, pero siem- 2. Detectar tempranamente a los pacientes afec-
pre los exámenes de laboratorio son necesarios para tados de enfermedades renales.
confirmarlo. Ante todo paciente con IRC es preciso
3. Dispensarizar a los enfermos presa de enfer-
determinar el grado de disminución de la función
medades renales crónicas que constituyen
renal, además de descartar la posible presencia de
ries- go de padecer la IRC.
factores agravantes reversibles.
La radiografía simple del tracto urinario puede
mostrar el tamaño de las sombras renales, que gene- Nivel secundario
ralmente son pequeñas, además de evidenciar la pre- Se desarrolla en los pacientes ya diagnosticados y
sencia de litiasis y calcificaciones renales. dispensarizados, con enfermedades renales
La cistografía retrógrada y miccional pone en crónicas y en aquellos afectados de IRC. Se
evidencia la presencia de la nefropatía de reflujo y ejecuta por el médico de la familia, con el
permite, además, estudiar el tracto urinario inferior. concurso del nefrólogo y los demás especialistas en
la consulta especializa- da del hospital. Los
objetivos son:
132
1. Prevenir el desarrollo de la IRC tratando la en- Control de la anemia. La anemia normocítica
fermedad de base. normocrómica propia de la IRC se trata con la
2. Ejercer acciones de salud para enlentecer la pro- eritropoyetina recombinante humana (gluco-
gresión de la IRC. proteína producida por el riñón), que ocasiona
3. Impedir el deterioro sistémico de los pacientes bienestar al paciente con IRC, pues el objetivo
con IRC. es elevar las cifras del hematócrito a 30 o 33
4. Preparar física, psíquica y socialmente al pa- %; para ello es indispensable el suministro
ciente para enfrentar la fase avanzada de la de hierro y vigilar las reservas totales de éste.
enfermedad. Se aplica en los estadios 1, 2 y 3 La saturación del hierro (hierro sérico/capacidad
de la IRC. de fijación del hierro total) es un mejor índice
so- bre el hierro disponible que las
Nivel terciario concentracio- nes séricas de ferritina. La dosis
Se atienden los pacientes en la etapa avanzada de la recomendada de eritropoyetina es de 50 a 100
IRC (grado 4) con la sustitución de la función renal U/kg por vía subcutánea o EV, 3 veces a la
mediante los métodos de tratamiento dialítico y el semana. Su ma- yor importancia radica en
trasplante renal. Es ejecutado por el nefrólogo y los que disminuye las posibilidades de
demás especialistas del nivel hospitalario. transfusión en el paciente y ofrece, por tanto,
En esta fase avanzada de la IRC (grado 4) el tra- las ventajas para evitar la tras- misión
tamiento se divide en 3 acápites: 1. médico, 2. parenteral de enfermedades virales, como la
dialítico y 3. trasplante renal. hepatitis y el SIDA.
Cuando la hemoglobina desciende por debajo
1. Médico. Está encaminado al control nutricio- de 60 g/L, el hematócrito es menor de 0,20L/L
nal, del metabolismo fosfocálcico, de la HTA (20 %) y aparecen síntomas, está indicada la
y de la anemia. transfusión de glóbulos. Parte del tratamiento
Control nutricional. Se debe dar un aporte ade- lo constituyen también las sales de hierro.
cuado de proteínas, carbohidratos, grasas, vi- Dentro del tratamiento médico se incluye,
taminas y minerales para garantizar no menos ade- más, el indicado en caso de
de 35 a 40 cal/kg/día. Las proteínas deben ser hipercaliemia, complicación que puede
de alto valor biológico, a razón de 0,6 g/kg. El amenazar la vida del enfermo; se administra
contenido de sodio sólo se restringe en los ca- gluconato de calcio a razón de 2g EV;
sos de edemas e hipertensión. bicarbonato de sodio EV; in- fusión de
Las vitaminas que se deben aportar son tiamina, dextrosa hipertónica con insulina y resinas de
rivoflavina, ácido pantoténico, niacina, pi- intercambio catiónico, como las re- sinas de
ridoxina, cianocobalamina, ácido fólico y vi- calcio, sodio y aluminio, que se ad-
taminas C, D y E. ministran por vía oral o rectal en forma de
Control del metabolismo fosfocálcico. Lo enema.
fundamental es la restricción del fosfato en la 2. Tratamiento dialítico. Ver el capítulo “Méto-
dieta (600 a 900 mg/día). Están indicados los dos dialíticos”.
quelantes de los fosfatos, como el carbonato de 3. Trasplante renal. Con el trasplante renal
calcio hasta una dosis promedio de 5g/día; tam- exito- so se logra la curación de la IRC
bién los derivados de la vitamina D, como la vi- terminal y para ello se necesita un donante
tamina D2 o D3, en dosis de 0,25 a 0,5 mg/día. cadáver o un donante vivo. Los pacientes
Otros derivados de ella son: dihidrotaquisterol, aptos para recibir un injerto, se estudian y se
calcitriol y calficediol. preparan; se deter- mina su tipo inmunológico
Control de la presión arterial. Para ello se re- y se incluyen en el Plan de Trasplante, donde
curre a la restricción del sodio, al uso de los entran a formar par- te del pool de enfermos
hipotensores habituales y a los diuréticos de asa, que esperan por ser trasplantados. Con los
como la furosemida en altas dosis, que pueden avances en la Inmuno- logía, se logra una
llegar hasta una dosis de 800 mg a 1,2 g en 24 adecuada selección donan- te-receptor, y con
h, en los casos de IRC grado 4. el desarrollo de las drogas inmunosupresoras,
una supervivencia notable, lo que
complementa el éxito del trasplante renal.
133
11

INSUFICIENCIA RENAL AGUDA


Concepto Insuficiencia renal aguda de causa renal
Todas las estructuras renales: vasculares, glomeru-
La insufiencia renal aguda (IRA) se define como la
lares, intersticiales y tubulares, pueden afectarse
caída brusca, casi siempre reversible, de la filtra- por procesos capaces de abolir, en forma aguda, la
ción glomerular, que suele acompañarse de oligu- fun- ción del riñón.
ria, y cuya consecuencia es la elevación de los Lesiones vasculares. Las oclusiones arteriales o
productos nitrogenados en la sangre, así como gra- venosas (émbolos, trombos, placas de ateroma,
ves alteraciones hidroelectrolíticas y acidobásicas. etc.), bilaterales o unilaterales en pacientes
Clasificación monorrenos, son susceptibles de provocar una IRA,
en la cual un diagnóstico precoz permitiría una
De acuerdo con el lugar donde se origine el fallo
terapéutica quirúr- gica potencialmente efectiva. La
renal agudo, la IRA se ha dividido en: prerrenal,
necrosis cortical bi- lateral, que se debe a trombos
posrenal y renal. que ocluyen capilares y arterias, como las
arciformes, relacionada con fre- cuencia con
Insuficiencia renal aguda prerrenal síndromes de coagulación intravascular
La alteración fundamental reside en la hemodiná- diseminada en el curso de un hematoma retro-
mica general, que al afectar al riñón por una dismi- placentario, placenta previa, shock anafiláctico,
nución del riego sanguíneo, no le permite funcionar etc., causa en ocasiones IRA.
adecuadamente, aun a pesar de que no existan le- Lesiones glomerulares. Cualquier enfermedad
siones orgánicas. Las enfermedades que con mayor que afecte los glomérulos de manera difusa y
frecuencia provocan una IRA prerrenal son innu- suficiente- mente intensa, puede producir una IRA.
merables (shock, deshidratación, insuficiencia car- La más co- mún es la glomerulonefritis aguda
díaca, cirrosis hepática, alteraciones de la resistencia posestreptocócica, que en ocasiones presenta una
fase de fallo brusco y severo de las funciones
vascular periférica originadas por sepsis, anafilaxia,
renales, que de manera habi- tual es reversible en
agentes anestésicos, etc.), pero todas tienen como
pocos días y cuyo diagnóstico resulta fácil por los
común denominador una hipovolemia funcionante. antecedentes, la forma de co- mienzo con
Es muy importante el reconocimiento precoz de es- hematuria e hipertensión y la intensidad de la
tos estados hipovolémicos, pues con un tratamiento proteinuria. También la glomerulonefritis rápi-
adecuado se logra la recuperación de la función vi- damente progresiva produce IRA, con frecuencia
tal en la mayoría de los casos. anúrica, circunstancia en que la biopsia renal tiene
gran importancia para asegurar el diagnóstico y se-
Insuficiencia renal aguda posrenal u obstructiva La ñalar su carácter casi siempre irreversible.
IRA posrenal es ocasionada por la obstrucción Lesiones intersticiales. Las nefritis intersticiales
intrínseca o extrínseca de las vías urinarias, que debe agudas por causas diversas producen en ocasiones
ser bilateral o presentarse en pacientes que sólo tie- un fallo renal agudo y debe pensarse en ellas con
nen un riñón funcional; generalmente es secundaria más frecuencia. Las de índole bacteriana en particu-
a litiasis, tumores y fibrosis retroperitoneal. lar (pielonefritis sobreagudas) son fáciles de reco-
nocer, tanto por el cuadro séptico general y local
que presentan, como por las alteraciones del
sedimento urinario, y es aquí donde una terapéutica
resolutiva

134
de procesos coadyuvantes (litiasis, estenosis, etc.) y Anatomía patológica
un tratamiento antibiótico bien dirigido, pueden ser
Aspecto macroscópico
salvadores.
Los riñones son grandes y edematosos; al corte
Lesiones tubulares. Hasta hace poco tiempo se
apa- rece una palidez cortical y una hiperemia
pensaba que un grupo de IRA producidas por isque-
medular.
mia renal o por nefrotoxinas, tenía como sustrato
anatómico una necrosis tubular aguda, por lo cual
se llegó a considerar este término como sinónimo Aspecto microscópico
de IRA. Cuando se utiliza el microscopio óptico, en la ma-
yoría de los casos no se observa tubulonecrosis ni
Las técnicas modernas han demostrado que la is-
tubulorrexis, como antiguamente se había señalado.
quemia renal y las nefrotoxinas afectan el aparato
Con la práctica de la biopsia renal percutánea, se
tubular y producen las lesiones que se describen en
han encontrado escasas lesiones histológicas; en el
el epígrafe “Anatomía patológica”, pero no tubulo- caso de la isquemia, el daño se reduce a focos par-
necrosis, al menos en la mayoría de los casos. Se celarios de necrosis a nivel del segmento delgado
han propuesto otros nombres para esta afección, del túbulo proximal y la porción gruesa ascendente
como el de nefropatía vasomotora; sin embargo, la medular, así como cilindros intratubulares, y en un
mayoría de los autores continúa utilizando aquel tér- gran número de casos el riñón es normal o sólo pre-
mino, y a él nos referimos en adelante. senta afinamiento difuso del ribete en cepillo tubular.
Etiopatogenia Sin embargo, estudios realizados con el micros-
copio electrónico en modelos experientales
Existen dos grupos etiopatogénicos de necrosis tu-
utilizan- do ratas intoxicadas con nitrito de
bular aguda: aquellas que ocurren como consecuen-
uranilo y aminoglucósidos, han demostrado
cia de nefrotoxinas y las que obedecen a isquemia
destrucción del ribete en cepillo de los túbulos
renal.
proximales y presen- cia de “cuerpos mieloides”,
1. Nefrotoxinas. que resultan de la cap- tación del tóxico
a) Drogas. (gentamicina) por endocitosis en
• Aminoglucósidos. el interior del lisoma de la célula tubular.
• Cefalosporinas.
• Vancomicina. Fisiopatología
• Sulfonamidas. La comprensión de los mecanismos fisiopatológi-
• Agentes antivirales. cos de la IRA, cada día avanza más apoyándose en
• Antinflamatorios no esteroideos. una mayor profundidad de los conocimientos y de
• Quimioterápicos. las técnicas en la experimentación con modelos
• Ciclosporina y tracolimus. ani- males, que tratan de asemejarse al modelo
b) Contrastes radiológicos. humano. En estos momentos las mejores
c) Solventes orgánicos. respuestas al pro- blema que nos ocupa están a
• Tetracloruro de carbono. nivel subcelular.
d) Metales pesados. Por estos motivos, los dos modelos de IRA que
• Litio, plomo, mercurio, bismuto. se presentan en casi todos los casos (el isquémico y
2. Isquemia renal. el tóxico), tienen puntos semejantes y otros que los
a) Shock. diferencian, por lo cual se explicarán por separado.
b) Septicemia. En el isquémico, la reducción del flujo sanguíneo
c) Cirugía de corazón, próstata, vías biliares, renal provoca una hipoxia mantenida, la cual llega
etc. a producir daño celular, que se manifiesta en el
d) Hemólisis grave. riñón por una disminución de los niveles de ATP
e) Politraumatismos (rabdomiólisis). a más del 90 % a los 10 min de una isquemia
f) Pancreatitis. completa. Esta caída del ATP es más marcada en
g) Otros. la corteza renal; sin embargo, los segmentos
tubulares de la médula externa son más
dependientes del suplemento de oxígeno y, por
tanto, se afectan más por el daño
isquémico.
135
De esta manera, el daño isquémico puede afectar Isquemia renal
a 2 poblaciones celulares renales y desencadenar una
cascada de alteraciones, respectivamente, según se
Células endoteliales Células epiteliales
trate de las células tubulares epiteliales o de las en- tubulares
doteliales, y al final provocar en ambas una resulante
ˉ ˉ ˉ
común: la disminución del filtrado glomerular.
Las alteraciones secundarias al daño de la célula Liberación de Producción de Alteración del
endotelial hipóxica, se manifiestan como trastornos endotelina óxido nítrico citoskeleto ˉ
intravasculares que se producen por el desequilibrio ˉ
entre el aumento en la producción de un potente Vasoconstrición
péptico vasoconstrictor, la endotelina-1, y una re- intrarrenal Despegamiento de
ducción en la de óxido nítrico, que es una sustancia células epiteliales
vasodilatadora; como resultado de este desbalance ˉ ˉ
en el mecanismo autorregulador tiene lugar una dis-
minución del coeficiente de ultrafiltración y del flu- Coeficiente Flujo sanguíneo Obstrucción Retrodifusión
ˉ
jo sanguíneo renal a causa de la vasoconstricción ˉde renal
intrarrenal. Todo lo anteriormente señalado lleva a ultrafiltración
una reducción de las fuerzas de filtración y, por tan-
to, a una caída de la filtración glomerular. ˉ Fuerzas de filtración
Por otra parte, la isquemia renal en forma de daño ˉ
Disminución del filtrado glomerular
celular hipóxico, al actuar sobre las células epitelia-
les tubulares, provoca alteración del citoskeleto ce- Fig. 11.1. Fisiopatología de la insuficiencia renal aguda isqué-
lular, que no es más que una red de filamentos mica.
proteicos de acetina, que además de ser un compo- Por su parte, el modelo de IRA tóxica puede ser:
nente estructural de la célula, tiene una función al- tóxico directo o por un mecanismo inmunológico.
tamente dinámica y participa en la mayoría de las El ejemplo clásico de IRA tóxica es la gentamici-
funciones celulares tubulares. Por este motivo, los na, la que al llegar al túbulo contorneado proximal
cambios del ribete en cepillo, que tienen un compo-
se reabsorbe por endocitosis, unida a un receptor a
nente de actina, se correlacionan con la afectación
nivel de las células del ribete en cepillo; es un pro-
del citoskeleto en la isquemia y desde el punto de
ceso en el cual se consume energía en forma de
vista histológico y por microsopia electrónica de
ATP e iones de calcio. De esta manera, el complejo
barrido, se corrobora la recuperación de las micro-
vellosidades con la reperfusión de la célula; bastan mo- lécula-receptor es incorporado al citosol, el
sólo de 30 a 60 min para apreciar la recuperación. lisosoma engloba la vesícula pinocítica y se forman
De no ocurrir la recuperación celular y mantener- se los “cuer- pos mieloides”, que no son más que
las alteraciones del citoskeleto, sobreviene el des- lisosomas car- gados de gentamicina, los cuales se
pegamiento de las células epiteliales tubulares. La rompen y liberan enzimas proteolíticas que lesionan
isquemia actúa sobre proteínas transmembrana cons- el ribete en cepi- llo con formación de cilindros,
tituidas por dos cadenas peptídicas (a y b), que se esfacelos y obstruc- ción intratubular con
nombran integrinas y funcionan conectando los ha- disminución del filtrado glomerular. Al ocurrir
ces de filamentos de actina del citoskeleto unido a la pérdida de clorosodio por la lesión de la célula
ligandos de la membrana basal. La isquemia actúa del túbulo contorneado proxi- mal, se produce
redistribuyendo las integrinas; se pierde el anclaje estimulación de la mácula densa y se libera renina,
interno del citoskeleto y la matriz extracelular de la se activa el eje renina-angiotensi- na-aldosterona,
célula tubular, y ésta se desprende y forma cilindros aumenta la vasoconstricción renal y disminuye aún
intratubulares en la luz. Esto favorece la obstruc- más el índice de filtración glomeru-
ción y la retrodifusión pasiva, que ocasiona una dis- lar (Fig. 11.2).
minución de las fuerzas de filtración y caída del En toda nefropatía tóxica en que se produce una
filtrado glomerular (Fig. 11.1). alteración de la permeabilidad de las membranas
celulares, hay disminución del ATP intracitoplasmá-
tico, alteración de los mecanismos de las bombas
de Na+, K+ -ATPasa y Ca2+ -ATPasa, acumulación
de
136
Nefrotoxinas

ˉ
Ruptura de lisosomas
ˉ
Liberación de enzimas proteolíticas
ˉ
Lesión del ribete en cepillo Lesión de las células
Escape de Na+ de los túbulos contorneados epiteliales glomerulares
proximales
ˉˉ ˉ
Mácula densa-aparato Formación de cilindros de esfacelos Caída de la capacidad
yuxtaglomerular de filtración
ˉ
ˉ ˉ
Liberación de renina Obstrucción intratubular Caída del filtrado
glomerular
ˉˉ
Vasoconstricción Caída del filtrado
glomerular
ˉ
Caída del filtrado
glomerular

Fig. 11.2. Mecanismo de producción de la insuficiencia renal aguda por nefrotoxinas.

calcio intracelular y disfunción de los organelos in- te, severas alteraciones humorales que pueden po-
tracelulares. ner en peligro la vida del enfermo. Entre éstas, se
describirán las más frecuentes.
Cuadro clínico Aumento grave del agua y el sodio orgánicos. Se
Los síntomas dependen de la causa que produce la debe generalmente a los tratamientos impuestos
IRA, así como de la forma clínica que adopte la afec- para combatir el shock en la fase previa a la
ción, de la cual se describen: necrosis tu- bular aguda, o a una mala regulación
de los ingresos cuando ya se encuentra instalada la
1. La forma oligúrica, la más frecuente y grave,
necrosis. Este exceso de agua y sodio predispone a
que evoluciona en tres fases o etapas: oligoanu-
la congestión pulmonar y a la insuficiencia
ria, diuresis y recuperación.
cardíaca.
2. La forma no oligúrica, que cursa con volumen
Hiponatremia dilucional. Está relacionada con el
urinario normal o elevado, suele ser más be-
nigna y casi siempre obedece a nefrotoxinas. aporte excesivo de agua, el aumento en la produc-
ción de agua endógena, el hipercatabolismo exis-
A continuación se describen las fases de la insu- tente y el escape de sodio al interior de las células.
ficiencia renal aguda oligúrica. Esta intoxicación acuosa es responsable de muchas
de las manifestaciones neuropsiquiátricas que
Fase de oligoanuria presentan los enfermos, como excitación, convul-
Se caracteriza por una oliguria severa (50 a 400 siones, etc.
ml de orina en 24 h) de baja densidad (alrede- Hipercaliemia. Tendencia habitual de los
dor de 1 012), que generalmente dura de 3 a 21 pacien- tes con insuficiencia renal aguda. Es una de
días, aunque en casos excepcionales es más pro- las alte- raciones electrolíticas más peligrosas, pues
longada. ocasiona trastornos del ritmo y muerte por paro
Durante esta fase se van desarrollando, de mane- cardíaco. Está relacionada con la ingestión de
ra progresiva y dependientes del fallo renal existen- alimentos ricos en potasio, el hipercatabolismo
existente, la liberación de este catión por esfacelos
y tejidos necróticos, y

137
con su salida de las células al espacio extracelular. Diagnóstico
La hipercaliemia, tan frecuente y grave en el curso El diagnóstico positivo de IRA se realiza ante un
de la IRA, debe ser vigilada constantemente. Su ma-
paciente con caída brusca de la diuresis (descartada
nifestación clínica más llamativa, además de la car-
la retención vesical), acompañada de un aumento
díaca, es la astenia muy marcada.
Acidosis metabólica. No falta nunca en la evolu- progresivo de los productos nitrogenados (urea,
ción de este proceso y se manifiesta por una respira- crea- tinina, etc.).
ción de tipo Kussmaul. El diagnóstico diferencial se hará entre los
Hipocalcemia e hipermagnesemia. Aunque pre- distin- tos tipos de IRA, mediante una valoración
sentes, tienen poca expresión clínica. minucio- sa de los antecedentes, la forma de
Retención de cuerpos nitrogenados. Desde el ini- inicio, los síntomas acompañantes y las
cio del fallo renal se produce un incremento progre- investigaciones com- plementarias. En la necrosis
sivo de los cuerpos nitrogenados (urea, creatinina, tubular aguda casi siem- pre se detecta el factor
ácido úrico, etc.), que llevará al paciente, en tiempo tóxico o isquémico; la oligoanuria es total y
variable y en relación con el catabolismo existente, habitualmente la fase oligúrica no se prolonga más
al síndrome urémico si no se toman las medidas ne- de 3 semanas.
cesarias (dieta, diálisis, etc.). En la insuficiencia renal aguda posrenal u obs-
Anemia. Hallazgo constante en los enfermos con tructiva es frecuente el dolor y una anuria total
IRA; es generalmente severa (hematócrito entre 20 (diu- resis nula); los pacientes mantienen un buen
y 25 %), normocítica, y está relacionada con pérdi- estado general durante los primeros días. Este
das de sangre, hemólisis y fallo en la actividad diagnóstico se confirmará con la radiografía
eritropoyética del riñón. simple del tracto urinario, urograma descendente,
renograma, arterio- grafía renal y pielograma
Fase de diuresis ascendente, según sea ne- cesario.
Se señala de manera arbitraria que esta fase comienza En la insuficiencia renal aguda prerrenal existe
cuando la diuresis sobrepasa los 500 ml diarios. Se la alteración hemodinámica que mantiene el proce-
caracteriza por un aumento progresivo de los volú- so, la oliguria se caracteriza por una orina de densi-
menes urinarios hasta alcanzar de 3 a 4 L diarios.
dad elevada (más de 1 014) y la excreción de sodio
Hay casos que presentan poliuria de 6 a 8 L dia-
está disminuida (menos de 40 meq/L). Pero mien-
rios. Esta poliuria está en relación con la carga
tras existan alteraciones hemodinámicas, la conducta,
osmótica a que son sometidas las nefronas que co-
más que a definir el daño renal existente, debe estar
mienzan a recuperarse, con la sobrecarga hidrosali-
na que presentan los pacientes al final de la fase dirigida a corregir lo antes posible la hipovolemia,
oligúrica y quizás con la inmadurez de las células el shock, etc.
tubulares en regeneración. La glomerulonefritis rápidamente progresiva
Durante esta etapa, las funciones renales se van con frecuencia crea problemas de diagnóstico con
recuperando lentamente y los enfermos aún presen- la ne- crosis tubular aguda, pero la falta de
tan aclaramientos disminuidos, así como alteraciones antecedentes tóxicos e isquémicos y la anuria casi
en sus capacidades de concentración y de excreción total que se prolonga, con proteinuria elevada,
de hidrogeniones. Hay, además, tendencia a la des- orientan hacia la glomerulonefritis, confirmada por
hidratación, hipovolemia e hipocaliemia, por lo cual la biopsia renal. La necrosis cortical bilateral en
debe mantenerse una vigilancia estrecha. pacientes con antecedentes de situaciones clínicas
donde la coa- gulación intravascular diseminada ha
Fase de recuperación desempeñado un papel (complicaciones obstétricas,
Comprende desde el momento en que se normalizan etc.), produce anurias prolongadas que hacen
las cifras de urea y creatinina hasta que se recupe- pensar en esta afec- ción. La biopsia renal será de
ran totalmente las funciones renales (concentración, gran utilidad para de-
eritropoyesis, etc.). Entre 6 y 12 meses después de finir el diagnóstico.
la necrosis tubular aguda, ya el riñón se ha recupe-
rado al máximo y con frecuencia en forma total. Tratamiento
La oligoanuria por necrosis tubular aguda constitu-
ye una situación clínica de máxima gravedad, pues
138
al fallo renal se suman severas lesiones en numero- El reposo en cama, casi siempre necesario en los
sos órganos. Por ello es necesario que los pacientes primeros días, debe sustituirse en cuanto sea posi-
reciban cuidados y tratamientos muy activos, que ble por una actividad física moderada, con el objeto
deben ser afrontados por grupos especializados (uni- de disminuir el catabolismo existente.
dades nefrourológicas). Aun así, la mortalidad por Los antibióticos deben utilizarse para el
esta afección es elevada (alrededor de 40 a 50 %), tratamien- to de las infecciones que se presenten y
con cifras extremas de 20 % en incompatibilidades no emplear- los de manera profiláctica. Las dosis,
transfusionales moderadas y 80 % en politraumatis- así como los intervalos de administración, se
mos severos. aplicarán según el fallo renal.
La conducta médica frente a este proceso pato- Medicamentos como el factor natriurético atrial,
lógico debe dirigirse en tres direcciones fundamen- bloqueadores de los canales del calcio, antagonistas
tales. de los receptores de endotelina-1, factores de creci-
miento, así como anticuerpos dirigidos contra mo-
Tratamiento preventivo léculas de adhesión, se han empleado en modelos
Tiene gran importancia, ya que muchas de las cau- animales de fallo renal agudo y se discute su uso y
sas de necrosis tubular aguda pueden ser evitadas. efectividad en el humano.
Incluye varias medidas: Medidas específicas. Se somete al paciente a un
control dietético estricto, con una vigilancia clini-
1. Uso adecuado de antibióticos nefrotóxicos. cohumoral estrecha y tan pronto aparezcan signos
2. Diagnóstico temprano y tratamiento efectivo de intoxicación acuosa, sobrehidratación, hiperca-
de las alteraciones hemodinámicas (hipovole- liemia, acidosis severa o retenciones importantes
mia y shock). de productos del metabolismo nitrogenado
3. Empleo de la transfusión de sangre sólo en ca- (creatinina,
sos con indicación precisa y con estricto con- 830 a 900 mmol/L o su equivalente de 9,3 a 10 mg
trol de la compatibilidad (pruebas cruzadas, etc.). %; urea, 29,8 a 33,3 mmol/L, o 180 o 200 mg %),
4. Tratamiento adecuado de las complicaciones se comenzarán los métodos de reemplazo de la
obstétricas y otras. fun- ción renal (diálisis peritoneal o hemodiálisis),
según las características de cada caso, y su
Tratamiento de la enfermedad causal y de sus com- programación y duración se aplicarán de acuerdo
plicaciones con las necesi- dades particulares de cada enfermo
Hay que tratar enérgicamente: durante el pe- ríodo oligoanúrico. Debe aclararse
1. El shock y las graves alteraciones hemodiná- que en muchos países se inicia el tratamiento
micas que con frecuencia se asocian en la fase dialítico con cifras de urea y creatinina inferiores a
inicial de la anuria. las señaladas.
2. El compromiso respiratorio (distress respira- En los pacientes cuya ingestión de calorías sea in-
adecuada, debe iniciarse temprano el soporte nutri-
torio, bronconeumonía, etc.).
cional, así como estabilizar sus condiciones clínicas
3. Los síndromes de coagulación intravascular y
y corregir los desequilibrios hidroelectrolíticos. De
fibrinólisis.
ser necesario se comenzará la alimentación por
4. Las sepsis graves, desencadenantes o com-
son- das o complementaria de la parenteral, la
plicantes del fallo renal, etc.
cual se facilita en forma de nutrición parenteral
intradialítica en los casos de empleo de métodos
Tratamiento del fallo renal
continuos de sus- titución de la función renal, que
Como el fallo renal tiene una duración variable, de 3
como la hemodiáli- sis continua arteriovenosa o
a 21 días aproximadamente, el tratamiento consiste
la venovenosa con bomba, facilitan el aporte de
en una serie de medidas encaminadas a mantener el
soluciones en enfer- mos hipercatabólicos,
paciente con vida y en el mejor estado humoral y
malnutridos y sépticos con fa- llo renal agudo.
nutricional posible durante dicho período.
El metabolismo energético se evalúa como pro-
Medidas generales. Contemplan el reposo y el
medio en 40 kcal/kg peso/d; se indicarán
empleo de algunos fármacos.
suplemen- tos de nitrógeno mezclando
aminoácidos esenciales y no esenciales, incluyendo
arginina e histidina. La
139
energía se suple con una mezcla de glucosa y lípidos 1. Administración parenteral en venoclisis de so-
con una tasa de 50/50. luciones glucosadas hipertónicas con insulina
Es necesario administrar insulina EV para man- para tratar de sintetizar glucógeno y así fijar
tener la glucosa en sangre por debajo de 10 mmol/L. el potasio dentro de las células; por
Además, deben suministrarse diariamente vitaminas, ejemplo, venoclisis de glucosa al 30 o 50
minerales y oligoelementos, todo con un aporte re- %, 500 ml con 30 U de insulina simple a 40
ducido de agua según la evaluación del paciente, la gotas/min.
diuresis y otras pérdidas. 2. Administración de soluciones de bicarbonato
Tan pronto el enfermo pueda ingerir alimentos, de sodio al 4 %, 200 o 300 ml en venoclisis
se le preparará una dieta que aporte proteínas de alto (40 a 60 gotas/min) para forzar la entrada de
valor biológico, hipercalórica y con pocas restric- potasio en las células.
3. Soluciones de calcio por su efecto antagónico
ciones, pues se le mantiene con un régimen de trata-
con el potasio a nivel cardíaco; por ejemplo,
miento hemodialítico intensivo.
gluconato de calcio al 10 %, 100 ml en 1 o 2
h.
Tratamiento de las crisis de hipercaliemia
Es una complicación frecuente durante el período El efecto de las medidas enumeradas es de corta
oligoanúrico que obliga a tomar medidas urgentes, duración, por lo cual deben complementarse con
por el peligro de arritmias y paro cardíaco. Tales procedimientos de extracción del potasio en exceso
medidas son: del compartimiento extracelular, lo que se logra
con enemas de resinas de intercambio catiónico y,
sobre todo, con la diálisis.
140
12

MÉTODOS DE
DEPURACIÓN
EXTRARRENAL
La insuficiencia renal constituye un importante pro- • Mediante un gradiente osmótico (altas concen-
blema de salud para el hombre desde épocas muy traciones de glucosa en el líquido de diálisis
antiguas. Hasta hace algunas décadas, los facultati- peritoneal).
vos que atendían a los enfermos con esta dolencia, • Mediante un gradiente hidrostático (presión
tenían que conformarse con la aplicación de un tra- ne- gativa en el lado del dializado en la
tamiento sintomático de dudosa eficacia, hasta que hemodiá- lisis)
fallecían. El advenimiento de los métodos de depu-
ración extrarrenal mejoró significativamente la su- Diálisis peritoneal
pervivencia de estos pacientes. En la actualidad, La diálisis peritoneal (DP) fue el primer método de
estos métodos se han convertido en procederes efi- depuración extrarrenal empleado en la clínica
caces y seguros que permiten a los enfermos con (Ganter, 1923). Ésta se realiza al poner en contacto
fallo renal agudo mantenerse vivos hasta recuperar la sangre del paciente que circula por los capilares
la función de los riñones nativos, y a los crónicos, peritoneales, con el líquido de diálisis que se in-
vivir largos períodos con una supervivencia de alre- funde en la cavidad peritoneal a través de una
dedor de un 65 % a los 10 años y una buena calidad mem- brana semipermeable, la peritoneal. La
de vida en espera de un eventual trasplante renal. renovación periódica del líquido de diálisis
Métodos de depuración extrarrenal permite el inter- cambio de solutos y agua en dos
direcciones. Ejem- plo: productos finales del
I. Diálisis peritoneal. metabolismo de la sangre a la solución de diálisis
II. Hemodiálisis. y tampones en la otra di- rección.
III. Otros métodos: La DP requiere de tres componentes claves:
• Hemofiltración.
• Hemodiafiltración. • Catéteres para DP.
• Hemoperfusión. • Líquidos de diálisis.
• Plasmaféresis. • Membrana peritoneal.

Bases físicoquímicas de la diálisis Los catéteres para DP son: agudo (semirrígido y


flexible) y crónico (flexible).
Todas las formas de diálisis se basan en la difusión El catéter agudo semirrígido está prácticamente
de moléculas pequeñas a través de una membrana en desuso y en la actualidad el más empleado es el
semipermeable: intracorpórea, con una membrana flexible. Se implanta por punción abdominal, 2 cm
biológica en la diálisis peritoneal, y extracorpórea, por debajo del ombligo y en la línea alba, en condi-
con una membrana sintética en la hemodiálisis. ciones de estricta esterilidad. Ambos se utilizan en
Los solutos pueden removerse desde la sangre en la DP aguda. Hay varios tipos de catéteres crónicos
virtud de dos mecanismos básicos: difusión y con- flexibles y el más conocido es el de Tenckkoff. Se
vección (ultrafiltración). implanta de manera quirúrgica y puede utilizarse
du- rante meses o años. Se emplea en la DP
Difusión: Mediante un gradiente químico. crónica.
Convección: Los líquidos de diálisis están básicamente consti-
tuidos por electrólitos, una sustancia buffer (lactato)

141
y agentes osmóticos (glucosa, polímeros de gluco- Cuando la DP se realiza de forma crónica, pue-
sa, etc.). La membrana peritoneal consta de dos par- den aparecer otras complicaciones tardíamente,
tes: el peritoneo parietal (10 %) y el visceral (90 %), como la formación de abscesos intrabdominales,
y está formada por células mesoteliales, vasos san- her- nias de la pared, edemas de los genitales
guíneos y linfáticos. Esta membrana se interpone externos y en etapas más avanzadas, desnutrición
entre la sangre y el líquido de diálisis, y actúa como proteica y pérdida de las defensas orgánicas.
una barrera filtrante.
La DP crónica intermitente, en nuestro medio,
suele practicarse 2 o 3 veces por semana durante 10 h Hemodiálisis
por sesión. La modalidad de DP más empleada mun- La primera hemodiálisis (HD) exitosa fue reportada
dialmente es la continua ambulatoria (DPCA), en la por Wilhem Kolph en la pasada década del 50. A
cual el paciente está sometido a tratamiento durante partir de entonces ésta se desarrolló vertiginosamen-
las 24 h del día. te. En la actualidad, la HD se ha convertido en el
Indicaciones tratamiento estándar de la insuficiencia renal en la
mayoría de los países del mundo. Es mucho más
La DP constituye el método dialítico de elección en
cos- tosa que la diálisis peritoneal.
la IRC terminal que aparece en los ancianos, diabé-
La HD tiene como objetivo suplir las funciones
ticos, niños y mujeres con escasa masa muscular; de excreción y regulación hidroelectrolítica del ri-
también se prefiere en los pacientes con SIDA, tan- ñón enfermo. Se realiza poniendo en contacto la
to agudos como crónicos, porque evita la manipula- san- gre del enfermo con el líquido de diálisis a
ción excesiva de la sangre. Además, tiene indicación través de una membrana semipermeable que
en algunas formas de IRA no catabólica, ciertas retiene las pro- teínas y los elementos formes de la
intoxicaciones exógenas, en la pancreatitis aguda y sangre, y permi- te sólo el intercambio de
en la insuficiencia cardíaca congestiva que no res- moléculas pequeñas. Se basa en la transferencia de
ponde al tratamiento médico habitual. masa por difusión y con- vección (ultrafiltración).
Contraindicaciones
Componentes esenciales del sistema
La DP tiene contraindicaciones absolutas en diver-
sos estados patológicos como la fibrosis peritoneal de hemodiálisis
severa, enfermedades inflamatorias del intestino en
• Dializadores.
fase aguda, casos con una cirugía abdominal recien-
te y en las mujeres embarazadas. El aneurisma de la • Máquinas de hemodiálisis.
aorta abdominal, los riñones poliquísticos, las her- • Líquidos de diálisis.
nias de la pared abdominal, la presencia de una • Acceso vascular.
colostomía, la diverticulosis colónica, la obesidad • Anticoagulación.
extrema y la psicosis, constituyen contraindicacio-
nes relativas para la DP. Los dializadores son los verdaderos riñones arti-
ficiales y están constituidos por una membrana se-
Complicaciones mipermeable y una estructura que le sirve de
Las complicaciones agudas que más frecuentemen- sostén. Básicamente se usan dos tipos de
te se observan en el transcurso de la DP son: membranas, las derivadas de la celulosa (menos
peritonitis, dolor abdominal y vómitos; sangramien- biocompatibles) y polímeros sintéticos (más
to, perforación de vísceras cuando se intenta colo- biocompatibles). Los dializadores capilares o de
car el catéter; algunas alteraciones cardiovasculares fibra hueca son los más utilizados en la actualidad.
como hipertensión e hipotensión arterial, arritmias e Las máquinas de hemodiálisis constan de una
insuficiencia cardíaca; también suelen aparecer bomba impulsora que regula el flujo de sangre que
trastornos metabólicos, como la hiperglicemia e pasa por el dializador y una bomba de proporciones
hipoglicemia; y, por último, trastornos hidroelectro- encargada de mezclar el agua tratada con la solu-
líticos, como deshidratación, hipernatremia, hipona- ción concentrada para HD, y al final formar el
tremia e hipocaliemia. líquido de diálisis, el que tiene una composición
electrolítica
142
muy parecida a la del líquido extracelular normal, modinámica, aunque también está relativamente
con escaso contenido de potasio y acetato o bicar- contraindicada en enfermos con escasa masa muscu-
bonato como tampones. lar (ancianos, mujeres y niños), así como en casos
Para la realización de una HD exitosa, se requie- con diátesis hemorrágica no corregida o condicio-
re de un acceso vascular que proporcione un flujo nes que propicien la hemorragia, y en aquellos con
de sangre adecuado (D 200 ml/min). Éstos accesos dificultad en el acceso vascular.
son de dos tipos: transitorios (inserción percutánea
de un catéter en una vena profunda) o permanentes Complicaciones
(fístula arteriovenosa interna). Las complicaciones agudas encontradas con más fre-
La anticoagulación se utiliza para evitar la trom- cuencia durante la HD son: hipotensión arterial, ca-
bosis del circuito extracorpóreo. El fármaco más lambres musculares, náuseas y vómitos, dolor en el
empleado es la heparina sódica. En situaciones es- pecho y en la espalda, cefalea, alteraciones hidro-
peciales puede realizarse una HD sin anticoagula- electrolíticas, fiebre y escalofríos, arritmias cardía-
ción. cas, hipoxemia, hemólisis y embolismo gaseoso.
La HD crónica suele practicarse 2 a 3 veces por A largo plazo también aparecen complicaciones,
semana durante 3 a 5 h por sesión, en dependencia y la subdiálisis, la amiloidosis y las infecciones
de la función renal residual, la técnica de HD em- virales (hepatitis B y C) son las más comunes.
pleada, la superficie corporal y las enfermedades aso-
ciadas del paciente.
Otros métodos de depuración
La prescripción de un tratamiento hemodialítico extrarrenal
adecuado a las necesidades individuales de cada Hemofiltración
enfermo es el principal objetivo que se persigue. La hemofiltración (HF) se realiza haciendo circular
Indicaciones la sangre del paciente a través de un hemofiltro que
La HD tiene indicaciones precisas en la IRA cuando tiene una membrana altamente porosa y
se desarrolla una hipercaliemia con manifestaciones semipermea- ble, lo que posibilita la obtención de
electrocardiográficas o una acidosis metabólica grave altos volúme- nes de ultrafiltrado plasmático.
que no se corrige con la terapéutica alcalinizante Su aplicación puede ser intermitente o continua,
habitual; también cuando aparecen manifestaciones con restitución de fluidos o no.
de insuficiencia cardíaca en el curso de una expan- La HF se realiza sola o combinada con la hemo-
sión del líquido extracelular en presencia o no de diálisis (hemodiafiltración).
oligoanuria, o cuando se presentan manifestaciones
del síndrome urémico. En los pacientes en los cua-
Indicaciones
les el síndrome de IRA ocurre en el marco del sín-
drome de respuesta inflamatoria sistémica, se La HF constituye el método depurador de elección
prefieren utilizar los métodos continuos de depura- para los pacientes con IRA oligúrica y severas ma-
ción extrarrenal (HD arteriovenosa y venovenosa nifestaciones de intoxicación hídrica, aunque tam-
continua y la hemofiltración arteriovenosa y veno- bién está indicada en enfermos con IRC terminal
venosa continua). que no responden adecuadamente a los métodos
La HD aguda también tiene indicación en algu- de- puradores habituales. Algunos autores la
nas intoxicaciones exógenas (barbitúricos, alcohol sugieren como tratamiento de la insuficiencia
metílico, salicilatos, etc.). cardíaca refrac- taria.
La HD periódica se inicia en los pacientes con
IRC cuando el filtrado glomerular es menor que 15 Hemoperfusión
ml/min o cuando aparecen manifestaciones La hemoperfusión (HP) consiste en hacer pasar la
tempranas del sín- drome urémico (pericarditis, sangre del paciente a través de un dispositivo que
neuropatía, etc.). Contraindicaciones contiene sustancias con gran poder adsorbente (car-
La HD convencional tiene contraindicación absolu- bón activado o resinas), capaces de extraer del plas-
ta en los pacientes con una severa inestabilidad he- ma toxinas y drogas.
143
Indicaciones Indicaciones
Su uso está limitado a las intoxicaciones graves Las principales indicaciones de estos métodos son:
por fármacos u otros venenos que depuren por esta
• Remoción de autoanticuerpos (LED, enferme-
vía.
dad por anticuerpos antimembrana basal glo-
merular, miastenia gravis, vasculitis sistémica,
Complicaciones esclerosis múltiple).
Las complicaciones más temidas de este método son • Extracción de inmunoglobulinas (síndrome de
la microembolización con partículas de resina o car- hiperviscosidad, mieloma múltiple, macroglo-
bón, reacciones pirógenas severas, hipotensión ar- bulinemia de Waldenström).
terial e hipotermia. • Eliminación de inmunocomplejos circulantes
(glomerulonefritis por inmunocomplejos, tor-
Inmunoabsorción y plasmaféresis menta tiroidea, toxina de Amanita phalloides).
Son técnicas de purificación extracorpórea que se • Lipoproteínas (hipercolesterolemia).
realizan de diferentes maneras: • Plaquetas (trombocitosis severa).

1. A través de la remoción total del plasma con la Teniendo en cuenta el alto costo de estos proce-
consiguiente devolución de los hematíes y leu- deres, así como las serias complicaciones que pue-
cocitos propios utilizando líquidos de restitu- den aparecer durante su realización, siempre deben
ción adecuados (plasma fresco congelado o ser indicados y supervisados por médicos con
albúmina). expe- riencia previa en su manejo.
2. Mediante la extracción selectiva de proteínas
Complicaciones
anormalmente acumuladas en el plasma.
Los calambres musculares, hipotensión arterial y
3. Por medio de la remoción selectiva de células urticaria, son las complicaciones mas frecuentes;
utilizando instrumentos de centrifugación (ci- también se observan, aunque son mucho menos
taféresis). usua- les, reacciones anafilácticas severas y la
muerte.
144
13

DIURÉTICOS
El tratamiento de la retención hidrosalina, en el curso d. Bumetanida.
de diversas enfermedades renales primarias y se- e. Torasemida.
cundarias, insuficiencia cardíaca, cirrosis hepática e 2. De baja actividad.
hipertensión arterial, incluye el uso de diuréticos, a. Inhibidores de la anhidrasa carbónica.
por lo cual el conocimiento de estos medicamentos • Acetazolamida.
resulta imprescindible para obtener los mejores re- • Benzolamida.
sultados en el tratamiento de dichas enfermedades. • Diclorfenamida.
Concepto • Metazolamida.
b. Benzotiadiazinas.
Diurético es toda sustancia capaz de aumentar la • Clorotiazida.
eliminación renal de agua y electrólitos. Un diuréti- • Hidroclorotiazida.
co ideal debe ser potente y eficaz por vía oral; tener • Hidrofluometiazida.
acción rápida y vida media prolongada; capacidad • Bendroflumetiazida.
para excretar aniones y cationes en la misma pro- • Benzotiazida.
porción en que se encuentran en el líquido extrace- • Politiazida.
lular, sin producir desequilibrios hidroeletrolíticos • Triclormetiazida.
ni trastornos de la función renal; no debe interferir c. Clortalidona.
con otras funciones metabólicas; su uso continuado d. Indapamida.
no debe disminuir su capacidad de acción ni produ- III. Diuréticos ahorradores de potasio.
cir efectos secundarios importantes y, por último, a. Espironolactona.
ha de ser barato. b. Amilorida.
c. Triamterene.
Clasificación
Los diuréticos han sido clasificados atendiendo a su Consideraciones generales acerca del
estructura química, el sitio de la nefrona donde ac- mecanismo de acción de los diuréticos
túan y desde el punto de vista de su potencia. En la Los diuréticos, aun cuando sus mecanismos de ac-
actualidad se prefiere clasificarlos atendiendo al tipo ción sean diferentes, cumplen cuatro reglas ge-
de diuresis que producen. nerales:

I. Diuréticos acuaréticos (osmóticos). 1. Cuando un diurético interfiere en la reabsor-


a. Urea (carbamida). ción del sodio en cualquier parte del túbulo, lo
b. Dextranes. hace también en las otras funciones tubulares
c. Manitol. relacionadas con la reabsorción de sodio a ese
II. Diuréticos saluréticos. nivel.
1. De gran actividad. 2. La reabsorción de sodio está aumentada en los
a. Mercuriales. segmentos tubulares distales en relación con el
b. Furosemida. sitio de acción de un diurético. Así, un diuréti-
co que actúe en el túbulo proximal, bloqueará
c. Ácido etacrínico.
la reabsorción de sodio a ese nivel, pero al

145
permitir que llegue mayor cantidad al túbulo Indicaciones
distal, en ese sitio se incrementa la reabsorción Los diuréticos osmóticos no son utilizados en el
de sodio. manejo de los estados edematosos habituales. Hoy
3. Los diuréticos podrán ejercer su acción sólo si en día tienen poca utilidad clínica. Su uso ha
el sodio endotubular alcanza su sitio de acción. queda- do reservado para el tratamiento del edema
Así, en el curso de una hipovolemia, práctica- cerebral y como prevención de la insuficiencia
mente todo el sodio filtrado se reabsorbe en el renal aguda en pacientes sometidos a cirugía
túbulo proximal, por lo cual la administración aórtica. También resultan muy útiles para
de un diurético que actúe a nivel del asa de establecer el diagnóstico di- ferencial de la
Henle, como la furosemida, no producirá efec- insuficiencia renal aguda prerrenal con la de causa
to alguno. parenquimatosa.
4. Los diuréticos que actúan en distintos sitios de
la nefrona o con mecanismos de acción dife- Contraindicaciones y efectos secundarios
rentes, pueden tener acción sinérgica. Su ad- La contraindicación fundamental guarda relación
ministración resulta de gran utilidad. con su mecanismo de acción, pues al extraer el
agua des- de el interior de las células, son capaces
Uso racional de la terapéutica de provocar una sobreexpansión del espacio
diurética extracelular y pro- ducir un edema agudo del
pulmón. De ahí que de- ban ser utilizados con
El uso racional de los diuréticos descansa en las ba-
precaución en los ancianos y en los cardiópatas.
ses siguientes:
No administrar a pacientes con insuficiencia renal
1. Conocer el sitio específico de la nefrona en que avanzada.
actúan.
2. Conocer la fisiología de la nefrona con el obje- Presentación, dosis y vía de administración
tivo de entender la causa de una respuesta El manitol al 20 % se presenta en frascos de 250 ml
inadecuada a los diuréticos en determinados es- (50 g). En el edema cerebral se comienza con una
tados edematosos. dosis de 0,5 a 1 g/kg de peso y se continúa con
3. Conocer la fisiopatología de la enfermedad en igual dosis cada 4 o 6 h. Se administra por infusión
la cual se van a administrar los diuréticos. EV en 20 o 30 min. Antes de aplicar la primera do-
sis, debe hacerse una prueba inicial administran-
do 12,5 g EV durante 3 a 5 min, para producir una
I. Diuréticos acuaréticos (osmóticos) La diuresis de al menos 30 a 50 ml/h y así comprobar
administración de diuréticos osmóticos provoca un que existe una función renal adecuada.
aumento de la presión osmótica del compartimien- to
extracelular, lo que trae como consecuencia mo- II. Diuréticos saluréticos
vimiento de agua desde las células hacia el espacio
extracelular y la consiguiente expansión del volu- 1. De gran actividad
men extracelular. Debido a este mecanismo se pro- Este grupo está constituido por drogas que tienen
duce un incremento del flujo plasmático renal y una acción enérgica y producen una rápida
dilatación de las arteriolas aferentes de los gloméru- movilización de agua y electrólitos, características
los; finalmente se acrecienta la intensidad de filtra- por las cuales constituyen los diuréticos de
ción glomerular. La presencia de un agente osmótico elección en el trata- miento de la mayoría de los
no reabsorbible en el túbulo proximal y en la rama pacientes necesitados de esta terapéutica.
ascendente del asa de Henle, limita la absorción de
agua y sodio. Además, al pasar por los vasos rectos a. Mercuriales
de la médula suprime el intersticio medular hipertó- Tienen importancia histórica, ya que fueron los pri-
nico y se produce una diuresis que está compuesta meros diuréticos enérgicos de que se dispuso. Los
por agua y, en un grado menor, por sal. Entre los más utilizados fueron la meralúrida (Novurit) y la
agentes osmóticos, el manitol es el más utilizado. mercurofilina (Mercuhydrín).
El advenimiento de diuréticos potentes de uso
oral y a la vez mucho menos tóxicos, ha limitado su
uso.
146
b. Furosemida cientes con insuficiencia cardíaca o hepatopatías,
Es un diurético potente, capaz de producir una diu- suele ser de 20 a 80 mg diarios, fraccionada en 3 o
resis masiva aun en pacientes refractarios al uso de 4 tomas. En el edema agudo del pulmón,
las tiazidas; bloquea hasta el 23 % del sodio que se habitualmente se utiliza por vía EV, de 60 a 80
filtra. Su estructura química se asemeja a la de las mg/dosis cada 4 o 6 h, la que se incrementa en 20 o
benzotiadiazinas, ya que tiene un grupo sulfamilo, 40 mg o se reduce el intervalo a cada 1 o 2 h,
pero difiere de éstas en el resto de su molécula (áci- según las necesidades. En la insuficiencia renal
do antranílico más radical furfurilo). crónica la dosis diaria puede alcanzar hasta 1 a 3
Su mecanismo de acción guarda relación con su g.
capacidad para bloquear la reabsorción de sodio y
cloro en la rama ascendente del asa de Henle y en c. Ácido etacrínico
menor cuantía en el túbulo distal, por lo que aumen- Es un diurético tan enérgico como la furosemida,
ta la excreción de agua, sodio, cloro, magnesio y aunque su estructura química no tiene parecido al-
calcio. guno con ella, ya que se trata de un cetoderivado
Indicaciones. La furosemida constituye el diuré- del ácido fenoxiacético. A pesar de la diferencia
tico de elección en los estados edematosos consecu- estruc- tural, su mecanismo de acción es similar.
tivos a las nefropatías, sobre todo si existe merma Su utili- dad se ha visto restringida por los efectos
de la función renal; además, también está indicada citotóxicos irreversibles que causa, y apenas se le
en el tratamiento de la insuficiencia cardíaca paroxís- emplea en la actualidad.
tica y en todo paciente donde la terapéutica con otros
diuréticos no produzca los resultados esperados. Es d. Bumetanida (Bumex)
de gran utilidad en el mantenimiento de una diure- Es el diurético más potente que existe en la actuali-
sis forzada para tratar las intoxicaciones. dad (40 veces más potente que la furosemida). Es
En la insuficiencia renal aguda se emplea para un derivado de la metanilamida, capaz de producir
realizar el diagnóstico diferencial entre las causas una diuresis marcada, con una elevada excreción de
prerrenales y renales, pero no tiene valor en el trata- sodio y cloro, relacionada con la dosis administrada.
miento de esta afección. Su mecanismo de acción está en correspondencia
Contraindicaciones y efectos secundarios. Prác- con su capacidad para bloquear la reabsorción de
ticamente no tiene contraindicaciones, aunque exis- sodio y cloro, no sólo en la rama ascendente gruesa
ten reportes de reacciones de idiosincrasia a este del asa de Henle, sino también en el túbulo proxi-
medicamento en algunos pacientes. Además, no debe mal y distal; este triple lugar de acción explica su
administrarse a enfermos que se encuentren en potencia.
anuria. La bumetanida se absorbe casi totalmente en el
Como efectos secundarios se destacan los rela- tubo digestivo (más de un 95 %); cuando se admi-
cionados con su potente acción diurética, por lo que nistra por vía EV, el inicio de su acción diurética es
puede producir deshidratación y alcalosis hipoca- casi inmediata y alcanza su efecto máximo entre
liémica. Cuando se utiliza en altas dosis, se han re- los 15 y 45 min. No altera la tasa de filtración glo-
portado alteraciones auditivas y vestibulares, que merular, aun en pacientes con insuficiencia renal.
cesan al suspender el medicamento. Se ha señalado Indicaciones. La bumetanida se utiliza en la ma-
también aumento del ácido úrico y de las transami- yoría de los estados edematosos consecutivos a
nasas en la sangre, tendencia a la hiperglicemia, así nefropatías, insuficiencia cardíaca y cirrosis hepáti-
como leucopenia y trombocitopenia, manifestacio- ca, sobre todo si se necesita obtener un alto volu-
nes todas que desaparecen después de suspender la men urinario en un período relativamente corto;
droga. también se emplea por vía oral en pacientes hiper-
Presentación, dosis y vía de administración. La tensos con merma crónica de la función renal, en
furosemida se presenta en ámpulas de 20 mg (2 ml) los que existe una retención de agua y sodio.
y 50 mg (3 ml), y en tabletas de 40 mg. Contraindicaciones y efectos secundarios. La
La dosis oral de este medicamento es individual bumetanida por lo general es bien tolerada.
y guarda relación con el efecto esperado; así, en pa- Está contraindicada en pacientes en anuria y
en las gestantes durante el primer trimestre.
En menos
147
del 5 % de los casos se han reportado vértigos y El mecanismo de acción de estos diuréticos con-
alteraciones auditivas que desaparecen al suprimir trarresta su efecto, pues su administración
su administración. Por su potente acción diurética, continua- da produce un aumento de la
la bumetanida suele causar deshidratación, desequi- concentración de hidrogeniones de tal magnitud,
librio electrolítico, episodios de hipotensión aguda que la reacción quí- mica bicarbonato-ácido
y colapso cardiovascular. carbónico se desplaza hacia el ácido carbónico sin
Presentación, vía de administración y dosis. Se necesidad de la acción enzi- mática.
presenta en tabletas de 1 mg y ámpulas de 0,5 mg Indicaciones. Actualmente, el uso de los inhibi-
de 2 ml. La dosis inicial por vía oral es de 1 mg por dores de la anhidrasa carbónica se ha limitado al
la mañana, la cual se puede repetir a las 6 u 8 h. Por tra- tamiento del glaucoma.
vía EV la dosis inicial es de 0,5 a 1 mg,que se repite Contraindicaciones y efectos secundarios. No
en dependencia del volumen urinario que se quiera deben ser utilizados en pacientes con insuficiencia
alcanzar. La dosis máxima es de 15 mg/día. renal ni con acidosis metabólica o respiratoria. Sus
efectos secundarios más frecuentes son somnolen-
e. Torasemida (Demadex) cia, anemia hemolítica, depresión medular y tras-
La torasemida es también un potente diurético de tornos digestivos.
asa, de acción rápida, cuyo mecanismo de acción es Presentación, vía de administración y dosis. La
similar al de la furosemida. No altera la tasa de fil- acetazolamida es la más usada. Se presenta en ta-
tración glomerular ni el flujo plasmático renal. bletas de 125 y 250 mg, y en cápsulas de 500 mg;
Indicaciones. Tiene indicaciones precisas en los también en bulbos de 500 mg.
pacientes con edema asociado a insuficiencia car- La dosis inicial es de 250 a 500 mg por vía oral
díaca congestiva y enfermedad renal o hepática; tam- o EV, que puede repetirse a las 4 o 6 h. La dosis
bién en la hipertensión arterial volumendependiente. total no debe exceder de 1 g/24 h. La
Contraindicaciones y efectos secundarios. Está administración IM causa dolor intenso en el sitio
contraindicada en pacientes con hipersensibilidad a de inyección porque este medicamento tiene un pH
la torasemida o algunos de sus componentes. Sus alcalino.
efectos adversos guardan relación con la depleción
hidrosalina que provoca. b. Benzotiadiazinas (tiazidas)
Presentación, vía de administración y dosis. Se En 1957, Beyer y colaboradores, investigando la
presenta en tabletas de 5,10 y 20 mg, y bulbos de 2 acción inhibidora de las sulfamidas sobre la anhi-
y 5 ml (10 mg/ml). La dosis inicial por vía oral o EV drasa carbónica, encontraron un compuesto secun-
es de 5 a 20 mg/d, que puede repetirse si la diuresis dario derivado de las benzotiadiazinas —la
que se obtiene no es adecuada. clorotiazida—, que tiene efecto ligero inhibidor de
2. De baja actividad la anhidrasa carbónica, pero que produce un consi-
derable aumento de la eliminación renal de agua y
a. Inhibidores de la anhidrasa carbónica de sodio unido a los cloruros. A partir de entonces
En 1948, Schwartz descubrió que la administración comenzó la era de los diuréticos orales efectivos.
de sulfanilamida provocaba la eliminación renal de Las benzotiadiazinas tienen como grupo central
agua y bicarbonato de sodio. Este descubrimiento un anillo sulfamilo halogenado, y a partir de este
fue la base de las investigaciones posteriores que núcleo central se ha obtenido una gran variedad de
permitieron el desarrollo de los diuréticos y una diuréticos (tiazidas) cuya diferencia fundamental es
mejor comprensión de la fisiología renal y del ion la vida media y la potencia de acción, aunque la
hidrógeno. diu- resis provocada por la dosis máxima de
Los inhibidores de la anhidrasa carbónica actúan cualquiera de ellos es similar.
a nivel del túbulo contorneado proximal y también Las tiazidas actúan en la porción proximal del
del distal, impidiendo la liberación de hidrogenio- tubo contorneado distal impidiendo la
nes y, por lo tanto, bloqueando la reabsorción de bi- reabsorción de sodio y cloro a ese nivel. La
carbonato de sodio. Tienen efecto inhibidor de la administración ininterrumpida de tiazidas
anhidrasa carbónica dondequiera que exista activi- produce aumento de la reabsorción de calcio en el
dad de esta enzima en el organismo. tubo contorneado proxi- mal; además, se ha
demostrado que estas drogas tie-
148
nen efecto vasodilatador directo sobre las arteriolas Se absorbe en más de un 95 % en el tracto
de los glomérulos. gastro- intestinal y es excretada por la orina en un
Indicaciones. Las tiazidas son las drogas de elec- 60 % o más; el resto, por la bilis. Tiene una vida
media pro- longada (16 a 18 h).
ción en el tratamiento de la hipertensión arterial benig-
na, así como en la insuficiencia cardíaca congestiva. No altera la tasa de filtración glomerular, aun en
Se ha demostrado su utilidad en los edemas de cau- los pacientes con insuficiencia renal.
sa hepática y resulta un medicamento principal en Indicaciones. La indapamida es el diurético más
el manejo de los pacientes con diabetes insípida utilizado en el tratamiento de la hipertensión arte-
pitresín-resistente, y también en los enfermos con rial benigna en la actualidad. Además, tiene indica-
hipercalciuria idiopática. ción en el edema consecutivo a la insuficiencia
Contraindicaciones y efectos secundarios. Están cardíaca congestiva y en el síndrome nefrótico. A
contraindicadas en la insuficiencia renal avanzada y diferencia de otros diuréticos tiazídicos, puede em-
en los pacientes en anuria. No se deben administrar plearse en pacientes hipertensos con insuficiencia
cuando hay antecedentes de hipersensibilidad a las renal crónica avanzada.
tiazidas o a algunos de sus componentes. Sus efec- Contraindicaciones y efectos secundarios. Está
tos secundarios aparecen en relación con su activi- contraindicada en enfermos con antecedentes de
dad diurética; la depleción de agua y sodio, y la aler- gia a la indapamida o a algunos de sus
alcalosis hipocaliémica son efectos indeseables componen- tes. Debe utilizarse con cautela en
que se presentan con relativa frecuencia. La hiper- aquellos con enfermedad hepática avanzada, gota
glicemia que estos medicamentos pueden producir, y LED.
debe alertar al médico cuando son utilizados en pa- Las reacciones adversas más frecuentes son los
cientes diabéticos; también puede tener lugar hiper- trastornos hidroelectrolíticos. La hipotensión arte-
calcemia, hiperuricemia e hipocaliemia. rial, arritmias cardíacas, debilidad, calambres muscu-
Presentación, vía de administración y dosis. En lares e hiperglicemia, son menos frecuentes (menos
este amplio grupo de drogas, la hidroclorotiazida es del 1 % de los casos).
la más utilizada. Se presenta en tabletas de 12,5, 25
Presentación, vía de administración y dosis. La
y 50 mg y en solución oral (10 mg/ml).
indapamida se presenta en tabletas de 1,25 y 2,5
Su administración es siempre por vía oral. La dosis
mg. En el tratamiento de la hipertensión arterial se
inicial es de 50 a 100 mg en una sola toma, preferi-
ad- ministra una dosis oral diaria de 1,25 mg por
blemente por las mañanas. Dosis máxima: 200 mg /
las mañanas, que se incrementan según las
día.
necesida- des. En el edema cardíaco o renal, la
dosis es de
c. Clortalidona
Es un derivado heterocíclico de las benzotiadiazinas 2,5 a 5 mg/día.
con un mecanismo de acción similar, aunque tiene
una acción más prolongada. Se ha demostrado que III. Diuréticos ahorradores de potasio
resulta muy útil en el manejo ambulatorio de los Estos diuréticos presentan en común la propiedad
pacientes con hipertensión arterial y con estados ede- anticaliurética y moderadamente natriurética, sin
matosos ligeros. embargo, son diferentes desde el punto de vista de
La dosis es de 25 a 100 mg/d o en días alternos, su estructura química. La espironolactona tiene una
en dosis única por las mañanas, por vía oral. estructura esteroidea y actúa de forma específica
como inhibidor competitivo de la aldosterona. El
d. Indapamida amiloride y el triamterene están compuestos de ba-
La acción diurética de la indapamida guarda rela- ses orgánicas y funcionan independientes de la al-
ción con su capacidad para bloquear la reabsorción dosterona.
de sodio y cloro en la parte proximal del tubo con- Todos los diuréticos de este grupo ejercen su ac-
torneado distal; además tiene efecto vasodilatador ción en la porción terminal del tubo contorneado
directo, quizás porque bloquea los canales del cal- distal y en el tubo colector, en donde inhiben la re-
cio de la pared vascular. absorción de sodio y, en consecuencia, la
diferencia de potencial negativa, que es la fuerza
impulsora para la secreción de iones hidrógeno y de
potasio en este
149
segmento. La natriuresis máxima inducida por cual- lizarse con cautela en los enfermos que llevan trata-
quiera de estas drogas, no supera el 2 o 3 % del miento con hipotensores del tipo de los betabloquea-
sodio filtrado y se acompaña de retención de potasio dores e inhibidores de la enzima convertidora de
e hi- drogeniones. angiotensina. La ginecomastia, disfunción sexual
Indicaciones. Los diuréticos ahorradores de eréctil y la disminución de la libido, pueden apare-
potasio son tan débiles, que su principal utilidad re- cer en los varones que llevan tratamientos prolon-
side en la prevención o el tratamiento de la hipoca- gados con espironolactona. El triamterene puede
liemia causada por otros diuréticos; también se causar anemia megaloblástica.
emplean para reforzar la acción diurética de otras Presentación, vía de administración y dosis. La
drogas sin que se produzcan pérdidas exageradas de espironolactona se presenta en tabletas de 25 mg y
potasio. La espironolactona está indicada en el la dosis habitual es 1 tableta 4 veces al día, por vía
aldosteronismo primario. oral.
Contraindicaciones y efectos secundarios. Estas El amiloride se presenta en tabletas de 5 mg. Do-
drogas están contraindicadas en los pacientes con sis: 5 a 10 mg/día.
insuficiencia renal aguda y crónica; además, en aque- El triamterene viene en cápsulas de 50 y 100 mg.
llos que reciben suplementos de potasio. Deben uti- Dosis: 100 a 300 mg/día, dividida en 1 o 2 tomas.
150
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153
Tercera Parte

ENFERMEDADES DEL SISTEMA


DIGESTIVO
14
RESUMEN
ANATOMOFISIOLÓGICO DEL
SISTEMA DIGESTIVO
esófago; se continúa principalmente en los
con éste sin límites dos ter- cios inferiores.
anató- micos precisos, La inervación sensitiva
El sistema digestivo es del cual se diferencia digestivas por sus corresponde al sistema
el conjunto de órganos funcionalmente por el componentes químicos, nervioso simpático.
que de una forma estrechamiento que lu- brica la cavidad
armónica transforma bucal y lengua. Funciones del esófago
faringoesofágico, que se
los alimentos ingeridos Son las siguientes:
co- noce con el nombre
en sustancias útiles, los de boca del esófago de
Esófago 1. Transportar los
incorpora mediante un Kilian. Glándulas Es una estructura líquidos y sólidos
proceso de absorción y cilíndrica por donde deglutidos desde la
salivales pasan los ali- mentos
luego excreta las sustan- faringe al
cias nocivas. Es un Las glándulas salivales hacia el estómago, que estómago.
son órganos que ocupa la parte inicial del 2. Evitar las
conducto o tubo que se
segregan un jugo cuello y atraviesa el regurgitaciones desde
extiende desde la boca
digestivo que se forma a tórax por el mediastino el estómago.
hasta el ano y consta de pos- terior hasta 3. Expulsar el aire de
numerosas partes con expensas de la san- gre
llamado saliva, líquido alcanzar el diafragma; su luz durante el
diferentes funciones. se introduce y ter- mina estado de reposo
especial con funciones
en el estómago a través fisiológico.
Cavidad bucal del hiatus esofágico. 4. Producir
Es una cavidad ubicada Consta de cuatro secreciones
en la parte inferior de porciones: cervical, mediante las
la cara y constituye la torácica, diafragmática glándulas que
y abdominal. Tiene protegen las
primera porción del tubo
una longitud de 25 cm paredes.
diges- tivo; en ella
en el adulto normal, su
ocurren las funciones calibre no es cons- tante
masticatorias y la 157
y se observa aplanado
insalivación de los en sentido anteroposte-
alimentos. rior. En estado
distendido se presenta
Lengua como un cilindro
Estructura irregular a causa de
musculomembranosa los estrechamientos
fisiológicos:
móvil, que está si- tuada
estrechamiento superior
en la cavidad bucal.
o cricoideo, es-
Consta de dos partes: trechamiento medio
una porción móvil y la aorticobronquial y
raíz de la lengua. estrechamien-
La porción móvil o to diafragmático.
lengua propiamente Inervación. La
dicha está recubierta por inervación del esófago
una mucosa es motora y sensitiva.
aterciopelada con unas La motora está formada
prominencias llamadas por nervios ex- trínsecos
papilas linguales, que se e intrínsecos. Los
di- viden en cinco nervios extrínsecos son
grupos: caliciformes, los neumogástricos o
vagos derecho e
fungiformes, filiformes,
izquierdo, que inervan
foliadas y hemisféricas.
la parte superior del
esófago. Los intrínse-
Faringe cos están constituidos
Es un conjunto por el plexo de
musculomembranoso Auerbach, si- tuado
situado entre la porción dentro de las capas del
posterior de las fosas músculo liso; regulan la
nasales, la boca y el motilidad esofágica,
Mecanismo de la deglución 2. Glándulas fúndicas: Se hallan en el cuerpo y
La deglución tiene tres etapas: oral, faríngea y eso- fondo gástricos, y producen moco, fermentos
fágica. digestivos y sustancias con propiedades endo-
Etapa oral: Corresponde al paso de los alimentos crinas.
desde la boca hasta la faringe, luego de ser prepara- 3. Glándulas cardiales: Glándulas ramificadas
dos por la masticación y la insalivación. compuestas de células mucosas.
Etapa faríngea: Cuando el material deglutido pe-
netra en la faringe, el músculo constrictor faríngeo Irrigación. Las arterias se disponen en un círculo
se contrae y origina ondas peristálticas que se pro- vascular formado por un arco arterial en la curvatu-
pagan hacia el esófago rápidamente; el esfínter eso- ra menor y otro en la mayor.
fágico superior se relaja y permite la penetración El arco arterial de la curvatura menor está
del bolo alimenticio en el tercio superior del esófago. forma- do por la arteria coronaria estomáquica,
Etapa esofágica: La onda peristáltica originada en rama del tronco celíaco, y la arteria pilórica
la faringe continúa hacia el esófago, arrastra el procedente de la hepática. El arco arterial de la
bolo y mantiene a lo largo del órgano un elevado curvatura mayor está constituido por la arteria
gradiente de presión. Esta onda recibe el nombre de gastroepiploica derecha, rama de la arteria
onda peristáltica primaria y provoca la relajación gastroduodenal, y la gastroepiploi- ca izquierda,
de los esfínteres esofágicos superior e inferior. Ac- rama de la esplénica.
túa con fuerza propulsiva suficiente para garantizar Flujo sanguíneo de la mucosa gástrica. El flujo
la entrada de los alimentos ingeridos al estómago. sanguíneo de la mucosa gástrica confiere a ésta un
Cuando las ondas peristálticas primarias no son mecanismo de resistencia frente al ácido clorhídri-
capaces de transportar un bolo sólido por la disten- co, el que contribuye a los procesos de
sión del esófago, se producen ondas peristálticas cicatrización y curación de las úlceras.
secundarias que se inician por detrás del bolo ali- La red vascular del estómago termina en nume-
rosas arteriolas, capilares y vénulas, que forman
menticio.
una malla de anastomosis. Estos capilares
Existen ondas peristálticas terciarias no propulsi-
presentan una pared delgada y fenestrada con alta
vas en el adulto mayor y en enfermos con esofagitis
permeabilidad, que favorece el aporte sanguíneo de
o hernia del hiatus; son ondas vagas, irregulares, lo-
nutrientes y de bicarbonato, todo lo cual está
calizadas en el tercio inferior del esófago. No se
regulado por el siste- ma nervioso autónomo, la
conoce su función. gastrina, la vasopresina y las prostaglandinas.
Todos estos factores constitu- yen lo que
Estómago Davenport conceptúo como barrera mu- cosa
Es un órgano hueco musculomembranoso con for- gástrica, responsable de la propiedad que tiene la
ma de gaita que se continúa con el esófago por arri- mucosa del estómago de impedir la difusión de
ba y el duodeno por abajo. Está situado en la parte ácido desde la luz gástrica hacia el espesor de la
superior de la cavidad abdominal y ocupa gran par- pared, con lo cual se defiende del efecto corrosivo
te del epigastrio e hipocondrio izquierdo. Presenta de su propia secreción.
dos caras, anterior y posterior; dos curvaturas, me- Inervación. El estómago está inervado por tres
nor y mayor, y dos extremos, superior e inferior; un sistemas imbricados entre sí: parasimpático, simpá-
orificio superior o cardias y uno inferior o píloro. tico y plexos intramurales.
Glándulas gástricas. Se distinguen tres varieda- des El sistema parasimpático tiene funciones secre-
de glándulas gástricas, las que cuentan con un toras y motoras, y libera acetilcolina, que
conducto excretor abierto en las criptas: interviene en la trasmisión de los impulsos
nerviosos.
1. Glándulas pilóricas: Ubicadas en el antro gás-
El simpático tiene funciones sensitivas y en sus
trico; producen moco, factor intrínseco indis-
sinapsis libera las sustancias encargadas de emitir
pensable para la absorción de la vitamina B12 ,
impulsos nerviosos, como son: adrenalina y nora-
y gastrina, elaborada por las células G de las
drenalina. Comprende los plexos celíaco y solar.
glándulas pilóricas.
Los plexos nerviosos intramurales se localizan
en dos capas de la víscera: en la submucosa el
plexo de Meissner, y en la muscular el de
Auerbach. Son dos
158
redes intramurales cuya función es regular la moti- ENZIMAS GÁSTRICAS
lidad del órgano, en lo que intervienen sustancias
como la histamina y la acelilcolina. 1. Pepsina. Enzima proteolítica del jugo gás-
trico.
Funciones del estómago 2. Renina. Coagula la leche.
Tiene múltiples funciones relacionadas con el pro- 3. Lipasa. Enzima que desdobla los lípidos.
ceso digestivo: 4. Gelatinasa. Enzima que licua la gelatina.
5. Lisozima. Desdobla los carbohidratos.
1. Motora. 6. Ureasa. Surge de las células de la mucosa
2. Secretora: ácido clorhídrico, pepsina y hormo- gástrica y bacterias.
nas. 7. Anhidrasa carbónica. Importante papel en
3. De reservorio y regulación de la evacuación de la formación de ácido clorhídrico.
los alimentos ingeridos.
4. De modificación y adaptación de la composi- Duodeno
ción química, pH y concentración de las comi-
Es la primera porción del intestino delgado. Tiene
das.
forma de herradura, de 25 cm de largo y 12 cm de
5. Antianémica mediante la producción de factor diámetro (distendido). Se divide en cuatro porcio-
intrínseco, que propicia la absorción de la vita- nes: 1ra., 2da., 3ra. y 4ta. porciones.
mina B12. 1ra. porción o bulbo duodenal. Se extiende desde
6. De absorción de algunos nutrientes. el píloro hasta el cuello de la vesícula biliar.
7. De eliminación de ciertos productos tóxicos. 2da. porción. En la luz de esta porción radican
dos eminencias o papilas llamadas carúnculas: la
Por su importancia, se explicará la función mayor o de Vater, donde desemboca el conducto
secretora. colédoco y el principal pacreático o de Wirsung, y
Función secretora. El estímulo para la secreción la carúncula menor, donde termina el conducto de
gástrica es nervioso y hormonal. El primero llega al Santorini.
estómago a través del nervio vago hasta el plexo ner- 3ra. porción. Termina a la altura de los vasos
vioso intrínseco, que inerva las glándulas secretoras me- sentéricos.
de moco y otras glándulas gástricas. El estímulo hu- 4ta. porción. Va desde los vasos mesentéricos
moral lo constituye la gastrina, liberada por las cé- hasta el ángulo duodenoyeyunal (ángulo de Treitz).
lulas G. Irrigación. El duodeno recibe la irrigación de la
La gastrina llega a los receptores de las células arteria hepática, que emite la gastroduodenal, y su
parietales y estimula la secreción de ácido clorhí- inervación procede del plexo solar y de los
drico y de pepsina, la motilidad gástrica y el aumen- ganglios
to del flujo sanguíneo. En la secreción gástrica mesentéricos superiores.
participan, además de la gastrina, colecistoquinina,
péptido liberador gástrico (bombesina), péptido Funciones del duodeno
vasoactivo intestinal, péptido inhibidor gástrico, se- El duodeno tiene tres funciones: motora, secretora
cretina, neurotensina y somatostatina. y endocrina.
Función motora. Mediante contracciones segmen-
Otros péptidos reguladores identificados recien-
tarias, permite la mezcla de las secreciones
temente son: encefalina, polipéptidos pancreáticos,
pancreá- ticas y biliares con los alimentos ya
péptido intestinal YY, glucagón, calcitonina y fac- macerados, y facilita la absorción. Las
tor liberador de corticotropina. contracciones peristálticas permiten la progresión
La actividad secretora del estómago es conside- del quimo hacia el yeyuno. Función secretora. Las
rable y en un individuo en ayunas el líquido secretado glándulas de Brunner pro- ducen grandes
fluctúa entre 500 y 1 500 ml. El jugo gástrico tiene cantidades de moco en respuesta a estímulos
componentes orgánicos e inorgánicos; es claro e in- táctiles, químicos y nerviosos. La princi- pal
coloro y contiene agua, ácido clorhídrico, sodio, función de estas glándulas es proteger la muco-
potasio, calcio, fosfato, bicarbonato y sulfato, sa del contenido ácido gástrico.
enzimas, factor intrínseco y moco. Función endocrina. La mucosa duodenal libera
un conjunto de sustancias hormonales que tienen
efectos estimulantes, inhibidores y mixtos, las cua-
les garantizan una armonía en el proceso digestivo.

159
1. Secretina. Polipétido que estimula la secreción Permite la mezcla del contenido intestinal.
de agua y bicarbonato o secreción hidroláctica Función secretora. Al llegar el quimo al intesti-
del páncreas, provoca la biliar e inhibe la gás- no, por medio de estímulos químicos y táctiles se
trica ácida. promueve la secreción de moco por las células cali-
2. Colecistoquinina-pancreozimina. Causa la se- ciformes y se forma el jugo entérico. Este jugo está
creción de enzimas pancreáticas, contrae la ve- constituido por las secreciones liberadas en la fase
sícula biliar y estimula la motilidad y la intestinal del proceso digestivo, y tiene como fun-
secreción gástricas ligeramente. ción efectuar la digestión final de los alimentos an-
3. Polipétido inhibidor gástrico. Inhibe la secre- tes de ser absorbidos.
ción gástrica ácida y estimula la liberación de
insulina por las células beta de los islotes de ENZIMAS DEL JUGO ENTÉRICO
Langerhans del páncreas.
4. Enteroglucagón. Inhibe la secreción gástrica 1. Peptidasas. Transforman los polipéptidos
ácida y la motilidad intestinal. en aminoácidos.
5. Enteroxintina. Estimula la secreción gástrica 2. Disacaridasas. Transforman los disacáridos
ácida cuando los aminoácidos se ponen en con- en monosacáridos: maltasa, isomaltasa, sa-
tacto con la mucosa. carosa, lactasa.
6. Otras hormonas. El péptido vasoactivo, la so- 3. Lipasa intestinal. Desdobla las grasas neu-
matostatina, la sustancia P, la neurotensina y el tras en glicerina y ácidos grasos.
péptido insulinotropo glucosa-dependiente, 4. Amilasa. Rompe los enlace 1,4 de la gluco-
inhiben la secreción gástrica ácida. sa del almidón contenido en los cereales y
viandas.
5. Amilopectina. Forma disacáridos (maltosa)
Yeyunoíleon a partir de azúcares complejos, como
El yeyunoíleon es el segmento del intestino que se maltotriona, destrinas alfa y oligosacáridos.
extiende desde el ligamento de Treitz en el duodeno
hasta el ciego, con el cual se anastomosa. Función absorbente. La función absorbente se
El epitelio superficial de su mucosa está formado caracteriza por un balance positivo entre la
por una capa de células cilíndricas llamadas entero- insorción y la exorción.
citos, que poseen un borde libre llamado “orla en La absorción puede efectuarse por transporte ac-
cepillo” porque presentan pequeñas pestañas o mi- tivo, como es el caso de los aminoácidos;
crovellosidades dirigidas hacia la luz intestinal. Es transporte pasivo, como sucede con las grasas, y
un epitelio velloso con gran importancia en las fun- transporte fa- cilitado, como ocurre con ciertos
ciones digestivas y absorbentes. monosacáridos.
Las vellosidades intestinales son proyecciones de En esta función intervienen varios factores,
la mucosa hacia la cavidad del yeyunoíleon, más como: la preparación del sustrato; el contacto con
numerosas y desarrolladas en el yeyuno que en el la super- ficie absorbente; el transporte específico
íleon y recubren las válvulas conniventes o de de sustra- to, como la vitamina D y calcio; y el
Keckring. Estas vellosidades tienen un epitelio ci- transporte a través de las células de la mucosa
líndrico de borde en cepillo, células caliciformes hacia los vasos sanguíneos y linfáticos.
productoras de moco, y células endocrinas llamadas Función endocrina. La hormona villiquinina
enterocromafines y leucocitos. estimula las contracciones rítmicas del intestino
Irrigación. Las arterias provienen de la mesenté- del- gado. Se liberan, además, otras hormonas,
rica superior, rama de la aorta abdominal, y la como se- cretina, colecistoquinina, pancreozimina y
inervación, del plexo mesentérico superior. glucagón. Hígado
Funciones del yeyunoíleon
Las principales funciones son: motora, secretora, ab- Se tratará en un capítulo aparte.
sorbente y endocrina.
Función motora. Se lleva a cabo mediante con-
Vesícula biliar
tracciones segmentarias y movimientos peristálticos. La vesícula biliar es el órgano que sirve de
reservorio a la bilis procedente del hígado y que está
compuesta
160
por agua, sustancias orgánicas (sales biliares, fos- tres porciones: la cabeza, que guarda estrecha rela-
folípidos, colesterol y bilirrubina conjugada) e inor- ción con la vena cava inferior y la renal derecha; el
gánicas (cloro, bicarbonato y potasio). cuerpo, situado por delante de la vena cava inferior
y de la arteria aorta; y la cola, que se halla en rela-
Funciones de la vesícula biliar ción con el bazo y el riñón izquierdo.
Tiene dos funciones fundamentales:
Funciones del páncreas
1. Concentración de la bilis. Tiene dos funciones: exocrina y endocrina.
2. Evacuación colecística. Función exocrina. El páncreas segrega el jugo
pancreático, rico en bicarbonato y enzimas proteo-
Concentración de la bilis. La vesícula biliar ab- líticas (endopeptidasas, exopeptidasas, nucleasas y
sorbe agua en grandes cantidades y concentra su tripsina), lipolíticas y aminolíticas, pancreoziminas
contenido entre 6 y 10 veces. y polipéptidos.
Evacuación de la bilis. Se produce por contrac- Acción del jugo pancreático. Son varias:
ción de la vesícula como respuesta a la colecisto-
quinina y relajación del esfínter de Oddi. 1. Por su contenido en bicarbonato neutraliza el
Mediante el sondaje duodenal se obtienen 3 tipos contenido gástrico, fuertemente ácido, que lle-
de bilis: ga al duodeno.
2. Por medio de las enzimas realiza la digestión
Bilis A proveniente del cóledo; es de color ama- de las grasas, carbohidratos y proteínas.
rillo canario. 3. Interviene en la absorción de la vitamina B12 y
Bilis B, que procede de la vesícula biliar; es de el calcio.
color castaño oscuro. 4. Inhibe la absorción del hierro por la mucosa
Bilis C, que fluye del hígado; es de color amarillo del intestino delgado (hipótesis).
oro.
Función endocrina. Esta función corresponde a
Papel de la bilis en el mecanismo de absorción la hormona insulina, cuya propiedad fundamental
Las sales biliares, los fosfolípidos y el colesterol se es facilitar la combustión de la glucosa.
hallan asociados a la bilis en forma de micelas; es
Colon
por esto que el colesterol se hace soluble en la bilis.
La bilis tiene participación importante y vital en la Es el segmento del intestino grueso que se extiende
absorción y digestión de las grasas. La grasa in- desde el ciego hasta el ano. Mide 1,5 m de largo,
gerida con la dieta, al llegar al intestino es atacada aunque puede llegar a 2 m, y está formado por seg-
mentos: ciego, colon ascendente, colon transverso,
por la lipasa pancreática, que la desdobla en ácidos
descendente, sigmoide, recto y ano.
grasos y monoglicéridos, los cuales son insolubles
El ciego tiene una prolongación cilíndrica, el
y no pueden ser absorbidos.
apén- dice vermiforme, con la cual se comunica a
Las sales biliares, que se excretan por la bilis, tie-
través de un orificio pequeño. Presenta la válvula
nen acción detergente y poseen una porción soluble ileocecal de Bauhin-Morgagni, que lo separa del
en agua y otra no polar, soluble en las grasas. Estas íleon.
moléculas se agrupan y forman las micelas. Dichos
agregados micelares tienen la propiedad de solubi- Funciones
lizar el material lípido insoluble en agua, por lo que El colon tiene tres funciones principales:
los ácidos grasos y monoglicéridos se disuelven en
la micela, de manera que son absorbidos y pasan a 1. Regula la válvula ileocecal y la entrada al co-
la célula intestinal. lon del contenido procedente del intestino.
2. Facilita la reabsorción hidrosalina, así como la
Páncreas mezcla del contenido colónico.
El páncreas es un órgano de origen glandular que 3. Los movimientos propulsivos o en masa eva-
tiene funciones digestivas y endocrinas. Consta de cuan y transportan hacia fuera gran parte del
contenido del intestino grueso.
161
15
CÁNCER DEL ESÓFAGO
Concepto Factores predisponentes
Hay consenso general y existe una correspondencia
El cáncer del esófago es uno de los tumores malig-
comprobada entre el consumo de alcohol y tabaco y
nos menos frecuentes del tractus digestivo, usual-
el cáncer del esófago, en este orden de importan-
mente de diagnóstico tardío; es difícil de tratar y cia y potenciándose mutuamente. Existen otros fac-
está entre los de peor pronóstico. tores relacionados con la dieta, que en algunos
En más del 98 % de los casos el tumor es primario, países ocupan un lugar importante, sobre todo
y lo más frecuente es que tenga un origen epitelial aquellas ri- cas en nitrosamida, calorías, grasas o
con predominio del tipo epidermoide (90 %) y el determinados ali- mentos.
adenocarcinoma, que en las últimas décadas ha te- Aunque la variedad histológica que se reporta
nido un incremento notable. con mayor frecuencia es el carcinoma
epidermoide, en las últimas décadas el
Incidencia y patogenia adenocarcinoma ha tenido un incremento notable,
La incidencia del cáncer del esófago varía según la que se trata de explicar por la existencia del
localización geográfica, la raza y el sexo. En los reflujo gastroesofágico, que conduce a una
países occidentales se reportan 3 casos por 100 000 esofagitis de reflujo, irritación crónica y a una
habitantes, lo que contrasta con la incidencia de 140 metaplasia glandular (esófago de Barret). Esta
por 100 000 habitantes en Asia Central. situa- ción se debe a factores genéticos y a la
posible con- currencia de agentes farmacológicos
En Cuba representa el 2,8 % de todos los cánce-
que producen relajación del esfinter esofágico
res del sexo masculino (11no. lugar) y 0,9% en el
inferior.
femenino (22do. lugar). La metaplasia glandular, conjuntamente con la
pre- existencia de mucosa embrionaria, mucosa
Edad gástrica ectópica y degeneración de las glándulas
El cáncer del esófago se presenta generalmente con submuco- sas del esófago, sustentan la hipótesis de
mayor frecuencia entre los 50 y 70 años. este incre- mento en frecuencia del adenocarcinoma
del esófago. Otros factores que pueden intervenir
Sexo en la pato- genia del cáncer esofágico son la
Hay un franco predominio en el sexo masculino acalasia, estenosis esofágica por cáusticos,
sobre el femenino, entre 4:1 y 6:1. tendencia genética, situacio- nes socioeconómicas y
enfermedad ulcerosa péptica.
Raza
Clasificación
Si bien es cierto que hay predominio en ciertas áreas
geográficas que coinciden con determinadas razas, Los tumores malignos del esófago se clasifican des-
todo parece indicar que otros factores, más que el de varios puntos de vista. Se expondrán dos.
racial, son los que determinan una incidencia más
Clasificación histológica.
elevada, tales como los factores de riesgo.
A. Tumores primarios.
1. Epiteliales.
a) Carcinoma de células escamosas (epider-
moide).

162
b) Adenocarcinoma. tra sus bordes. Con muy poca frecuencia el tumor
c) Carcinoma adenoideo quístico. se limita sólo a la mucosa, donde produce un
d) Carcinoma mucoepidermoide. pequeño engrosamiento, nódulo o elevación de
e) Carcinoma adenoescamoso. color blanco- grisáceo, que se denomina carcinoma
f) Carcinoma indiferenciado. intraepitelial, carcinoma in situ o cáncer precoz. Si
g) Melanoma maligno. esta lesión no es tratada, con el transcurso del
2. No epiteliales o mesenquimatosos. tiempo suele crecer y extenderse siguiendo el eje
a) Leiomiosarcoma. mayor del esófago y en unos meses rodear toda su
b) Fibrosarcoma. luz.
c) Linfosarcoma (para algunos autores lesio- Después se desarrollan cuatro tipos morfológicos
nes secundarias invasivas). diferentes. El más frecuente es una lesión fungosa,
3. Mixtos. polipoide o vegetante, que hace protrusión en la
a) Carcinosarcoma. luz. El segundo tipo es una úlcera cancerosa que
B. Tumores secundarios o metastásicos. entra profundamente en las estructuras vecinas y
puede causar erosión en el árbol respiratorio y
Clasificación topográfica aorta, y penetrar en el mediastino y el pericardio.
Está basada fundamentalmente en la parte del esó- La terce- ra variante morfológica es una forma
fago donde asienta el tumor. La Unión Internacio- infiltrante difusa que tiende a progresar dentro
nal del Cáncer lo divide de la siguiente manera: de la pared del esófago y provoca engrosamiento,
esófago cervical y esófago torácico superior, medio rigidez y es- trechamiento de la luz, con úlceras
e inferior. irregulares de la mucosa. El cuarto tipo o
ulcerovegetante se pre- senta como una masa
1. Esófago cervical. Comienza en la unión fa- vegetante con ulceración en su parte central.
ringoesofágica, a nivel del cartílago cricoides,
y alcanza hasta su entrada en el tórax, aproxi- Aspecto microscópico
madamente a unos 15 o 18 cm de los dientes Desde el punto de vista histológico, el 80 o 90 %
incisivos superiores. de todos los tumores del esófago son carcinomas
2. Esófago torácico: epi- dermoides (carcinoma de células escamosas),
a) Porción torácica superior: Se extiende desde que muestran todos los grados de diferenciación,
su entrada en el tórax hasta el borde infe- desde los más diferenciados con formación de
rior de la sexta vértebra dorsal (la bifurca- perlas cór- neas hasta los pobremente
ción de la tráquea), a unos 24 o 26 cm de diferenciados.
los incisivos superiores. El adenocarcinoma del esófago es una entidad
b) Porción torácica media: Comprende desde rara, pero su incidencia ha ido aumentando en los
el borde inferior de la sexta vértebra dorsal últimos años. Proviene de glándulas esofágicas nor-
(bifurcación de la tráquea) hasta el borde males, mucosa gástrica heterotópica, persistencia
inferior de la 8va. vértebra dorsal (el punto de mucosa embrionaria y metaplasia glandular en
medio entre la bifurcación de la tráquea y el esófago de Barret. Microscópicamente muestra
la unión esofagogástrica), a unos 32 cm de las características típicas del adenoacantoma o de
los dientes incisivos superiores. un adenocarcinoma con focos de metaplasia
c) Porción torácica inferior: Se extiende desde escamosa. Cuadro clínico
el borde inferior de la 8va. vértebra dorsal
hasta la unión esofagogástrica, a unos 38 Comienzo
o 45 cm de los dientes incisivos superiores, En el momento del diagnóstico, el paciente se queja
e incluye el llamado esófago abdominal. con mayor frecuencia de disfagia, pero desgracia-
damente en la mayoría de los casos éste es un signo
Anatomía patológica de enfermedad avanzada. Un interrogatorio acucio-
Aspecto macroscópico so muestra historia previa de pirosis, dolor retros-
El cáncer del esófago se origina en la mucosa ternal de naturaleza vaga, eructos frecuentes y
esofágica, crece circularmente y se expande e infil- regurgitaciones, pero estos síntomas iniciales no
son reconocidos con la debida importancia por
parte de
163
la mayoría de los pacientes, al igual que las prime- La disfagia es progresiva, primero para los ali-
ras manifestaciones de dificultad en la deglución, mentos sólidos, luego para los semisólidos y, por
todo lo que influye de forma negativa en la realiza- último, para los líquidos, es decir, que acaba por
ción de un diagnóstico precoz (Fig 15.1). ser completa. Este síntoma es el resultado de la
infiltra- ción del tumor alrededor del esófago con
constric- ción de la luz.
Dolor. Es el síntoma inicial en el 10% de los pa-
cientes y acompaña a la disfagia, que resulta dolo-
rosa al intentar pasar los alimentos sólidos o
líquidos por la zona tumoral; su localización está
relaciona- da con el asiento del tumor y la
extensión de éste a zonas vecinas.
Regurgitación: Constituye uno de los síntomas
más frecuentes de la obstrucción esofágica: el con-
tenido esofágico acumulado fluye a través de la
boca y en él pueden encontrarse partículas de
alimentos sin digerir; suele ocurrir 5 o 10 min u
horas después de la ingestión de alimentos, que
generalmente son devueltos sin esfuerzo tal y como
fueron ingeridos. Salivación: La salivación
excesiva es común en los enfermos con
obstrucción esófagica por carci-
noma, incluso, a veces, fuera de las comidas.

Síntomas generales
La anorexia y la astenia son marcadas. El estado
general del paciente se altera con rapidez, la pérdi-
da de peso, lenta al inicio, se acrecienta en forma
Fig. 15.1. Cáncer precoz del esófago: imagen radiológica. precipitada y rápidamente sobrevienen la caquexia
y la muerte. Se pueden encontrar, además, otros
Entre los síntomas iniciales del cáncer esofágico sín- tomas que dependen de la invasión del tumor
está el dolor, que por lo general es tardío y depende o de sus complicaciones.
de la extensión del tumor al mediastino, o del cua- Disfonía. Aparece sobre todo en los casos de
dro oclusivo neoplásico, o a veces el paciente lo cán- cer esofágico de localización alta y se debe a
manifiesta como sensación de un cuerpo extraño. la pa- rálisis recurrencial por infiltración de este
nervio o invasión directa de la laringe.
Período de estado Tos. Se debe a regurgitación del contenido
En este período los síntomas característicos son los esofá- gico hacia la laringe, a irritación refleja, o a
siguientes: la inva- sión de la laringe, tráquea o bronquios con
Disfagia. La disfagia es el síntoma más elocuen- formación de fístulas, que secundariamente suelen
ocasionar procesos infecciosos pulmonares o
te, de ahí el gran valor que se le debe dar en todo
mediastinales. Hemorragia. No son muy frecuentes
enfermo con más de 40 años que nos visita por una
y se deben a la ruptura o erosión de un vaso
dificultad para la deglución, que de modo inexpli-
sanguíneo o por la
cable, pero lento y sostenido, viene notando desde
infiltración tumoral.
hace algún tiempo; primero sólo era pasajera y la
vencía con degluciones acompañadas de pequeños Examen físico
sorbos de agua, luego debía hacerlo siempre así y No tiene gran valor para determinar la presencia o
ahora se manifiesta por una franca dificultad para ausencia de un cáncer esofágico, sólo que al ir evo-
pasar los alimentos sólidos y hasta los líquidos. lucionando la enfermedad se detecta la pérdida pro-
gresiva de peso y las posibles adenopatías
cervicales, supraclaviculares o axilares. El examen
de las cuer-
164
das vocales muestra en ocasiones parálisis de éstas. de aquellas neoplasias del esófago inferior en las
Raras veces se encuentra una hepatomegalia secun- que pueda haber extensión hacia el estómago.
daria a metástasis. TAC del tórax y el abdomen. Se aprecian los de-
talles de las características del tumor, su extensión
Exámenes complementarios a las estructuras vecinas, y las posibles metástasis
Estudios imagenológicos a distancia.
Los estudios radiológicos, conjuntamente con otros Ultrasonografía. El ultrasonido (US) del cuello
exámenes, conducen al diagnóstico en todos los pa- detecta las metástasis en los ganglios cervicales y
cientes portadores de esta enfermedad. del abdomen, las metástasis hepáticas y en los
Radiografía de tórax. En las posiciones posteroan- ganglios retroperitoneales.
terior y lateral determina la presencia de metástasis
pulmonares, la invasión mediastinal del tumor o de- Estudios endoscópicos
tecta procesos infecciosos pleuropulmonares. Entre sus posibilidades, están las de identificar el
Radiografía contrastada de esófago, estómago y tumor y sus caracteres macroscópicos, determinar
duodeno. Permite apreciar las características del tu- su localización, grado de permeabilidad del esófa-
mor (localización exacta de sus límites superior e go, realizar lavado y citología exfoliativa y tomar
inferior, tamaño en sentido vertical, grado de este- muestra para biopsia. Además de precisar los deta-
nosis y dilatación preestenótica infiltrativa). Los sig- lles del esófago, posibilitan apreciar el estado del
nos radiológicos dependerán del tipo de tumor; si se estómago y duodeno.
trata de uno vegetante, existirá un defecto de reple- US endoscópico. Fue utilizado al inicio para de-
ción; si es infiltrante, aparecerán una constricción y terminar el estadio de estos tumores; ahora se usa
estenosis de variable extensión y por encima de ésta como modalidad diagnóstica para cáncer del esófa-
el esófago estará dilatado (Fig 15.2). En el carcino- go, sobre todo en aquellos pacientes donde la en-
ma ulcerado el estrechamiento de la luz esófagica doscopia y biopsia convencionales fueron negativas,
es menor, pero existen irregularidades que indican o se sospecha radiológicamente o por endoscopia
una destrucción de la mucosa. alguna presentación atípica. Con este estudio se de-
termina el grado de infiltración tumoral de la pared
del esófago, muchas veces no visible por ser sub-
mucosa.
Por otra parte, el US endoscópico posibilita la
realización de un examen citológico aspirativo con
aguja fina cuando éste dio negativo por los
métodos convencionales.
Según la localización y el grado de extensión del
tumor, puede ser necesario realizar otros estudios
adicionales; por ejemplo: cuando existe parálisis
recurrencial, se realizará una laringoscopia indirecta,
y cuando se sospecha una extensión o infiltración
de la tráquea, estará indicada una traqueobroncos-
copia.
Fig. 15.2. Estrechamiento alargado y defecto de lleno en el Laparoscopia convencional y US laparoscópico.
tercio inferior del esófago por un tumor infiltrante. Se utilizan para determinar la invasión tumoral a
Este estudio permite valorar, además, el estado otros órganos del abdomen superior y a los
del estómago y duodeno. ganglios linfáticos intrabdominales.
Rayos X dinámico del esófago. Con este estudio Entre otros exámenes complementarios que pue-
se comprueba la extensión del tumor y la existencia den ser utilizados, está la coloración de la mucosa
esofágica con una solución iodada que mejora la
de rigidez producida por la infiltración tumoral con
detección y delineación endoscópica del cáncer es-
mayor precisión; las técnicas especiales (técnica del
camoso del esófago y la displasia escamosa. Por
polo superior del estómago) posibilitan la detección
otra
165
parte, están el empleo de los marcadores tumorales
para el seguimiento de los pacientes con cáncer del
esófago (C y FRA 21-1, SCCAg CEA, CA 19-9).
Diagnóstico
Diagnóstico positivo
En todo enfermo mayor de 40 años que presenta
dolor acompañado de disfagia, el médico debe estar
alerta y sospechar la posibilidad de una neoplasia
del esófago. Si a estos síntomas se añaden regurgi-
tación, salivación y pérdida de peso, este diagnósti-
co se impone.
Con el desarrollo de las técnicas actuales de
diag- nóstico, si existe la más mínima sospecha, se
puede llegar al diagnóstico del cáncer del esófago,
aún en los estadios iniciales, en más del 95 % de los
enfermos. Los estudios imagenológicos y
endoscópicos, jun- to a la biopsia, dejarán muy
pocas posibilidades para que no pueda detectarse la
presencia de esta enfer-
medad.
Diagnóstico diferencial Fig. 15.3. Extensa estenosis cicatrizal esofágica producida por
Se establecerá con todas aquellas afecciones capa- la ingestión de un caústico.
ces de producir disfagia.
Los trastornos motores esofágicos que correspon- enfermedad; desgraciadamente la mayoría de las
den a anormalidades de la motilidad esofágica cau- veces el enfermo llega a la consulta en un estadio
sadas por una alteración en los mecanismos de avanzado de ésta. La supervivencia mayor de 5
control neurohormonal o muscular del cuerpo eso- años es alta cuando el diagnóstico se hace en el
fágico o de sus esfínteres. El diagnóstico se basa en estadio inicial de la enfermedad, pero no sucede
las anomalías motoras esofágicas, detectadas fun- así en el resto de los pacientes, en los que
damentalmente por los estudios manométricos. aquella es muy pobre.
Dentro de este grupo se encuentran los trastornos Con los modernos medios de diagnóstico y los
motores primarios, que traen como consecuencia la diferentes métodos de tratamiento actuales es de
acalasia, espasmo esofágico idiopático, peristalsis es- perar mejores resultados.
esofágica sintomática y las formas intermedias y de
transición. Complicaciones
Se debe hacer también el diagnóstico diferencial El estadio tardío en que suele diagnosticarse a estos
con los trastornos esofágicos que aparecen en enfer- enfermos y la estrecha relación del esófago con
medades generalizadas o sistémicas, como: esclero- otras estructuras importantes, explican las numerosas
dermia y otras colagenosis; miopatías; lesiones del com- plicaciones.
SNC y neuropatías periféricas. La complicación grave encontrada con mayor fre-
Por último, con aquellos trastornos motores eso- cuencia es la fístula esofágica a la tráquea o bron-
fágicos secundarios a otras afecciones orgánicas, quios, que produce rápidamente neumonitis por
como: hernia hiatal, esofagitis de reflujo, estenosis aspiración, abscesos pulmonares, empiema, etc.
esofágicas (Fig 15.3) y divertículos, etc. Como complicación menos común y peligrosa
Evolución y pronóstico para la vida, está la parálisis del nervio laríngeo re-
La evolución y el pronóstico dependen de manera currente.
invariable del diagnóstico temprano o tardío de la En el 3 a 5 % de los enfermos ocurre, además,
una hemorragia tumoral grave.

166
Tratamiento la supervivencia, sólo produce una discreta mejoría
La cirugía es el principal tratamiento del cáncer del del control local y puede provocar complicaciones
y reducir la calidad de vida.
esófago, capaz en etapas tempranas de lograr la cu-
ración (operación radical que incluye esofagectomía La quimioterapia es hasta la fecha muy poco
y linfadenectomía regional), pero en la mayoría de efec- tiva, pues esta neoplasia es bastante resistente
los pacientes con tumores avanzados, la cirugía sólo a los medicamentos de que se dispone
tiene un papel paliativo (bypass, gastrostomía, actualmente. Su indicación básica es asociarla a la
yeyunostomía, etc.). No se ha demostrado que la radioterapia.
radioterapia preoperatoria ni posoperatoria debe La intubación intratumoral en sus diferentes for-
emplearse de forma sistemática, pues no modifica mas será otro proceder paliativo que se puede utili-
zar en estos pacientes.
167
16
GASTRITIS
Concepto 2. Tipo B: relacionada con H. pylori (antro).
3. Tipo AB.
Se denomina gastritis a un grupo de enfermedades
que tienen en común provocar lesiones inflamato- III. Formas infrecuentes de gastritis.
rias en la mucosa gástrica, pero que se diferencian 1. Gastritis linfocitaria.
en sus manifestaciones clínicas e histológicas, así 2. Gastritis eosinófila.
como en sus mecanismos de producción. 3. Enfermedad de Crohn.
En muchas ocasiones se denomina gastritis a la 4. Gastritis granulomatosa aislada.
presencia de síntomas funcionales referentes al tubo GASTRITIS AGUDA
digestivo superior, lo cual es un error, pues se de-
ben nombrar como dispepsia inespecífica o no Gastritis por
ulcerosa; así como tampoco es correcto llamar gas-
tritis aguda a las lesiones erosivas/hemorrágicas que
Helicobacter pylori
se producen por el uso de antinflamatorios no La infección aguda por H. pylori provoca una gas-
esteroideos (AINE), alcohol, stress, sino denomi- tritis aguda superficial. Se han visto varios brotes
narlas gastropatías, ya que no se encuentran signos epidémicos de gastritis aguda por este microrganis-
histológicos de inflamación significativos, ni en las mo que tienen un patrón típico de trasmisión fecal-
oral, igual al de la hepatitis A. También puede
márgenes de la erosión ni en las zonas adyacentes.
existir la trasmisión oral-gástrica al haber exposición
Clasificación al jugo gástrico de los pacientes infectados, como
Son numerosas. Recientemente se propuso la clasi- sucede con endoscopios y sondas nasogástricas
ficación llamada sistema de Sidney, que incluye cri- contaminados. La infección por H. pylori aumenta
terios endoscópicos, histológicos y etiológicos, pero con la edad
es muy compleja, por lo que para la práctica diaria con una tasa promedio de 1 % anual.
no es útil; por ello se expondrá una más sencilla.
Cuadro clínico
I. Gastritis aguda. En algunos casos hay dolor y ardor en el epigastrio,
1. Gastritis aguda por H. pylori. náuseas y vómitos. El dolor es fijo, mantenido, de
2. Otras gastritis agudas infecciosas. intensidad moderada, y se exacerba con la ingestión
a) Bacteriana (diferentes de H. pylori). de alimentos. Al estado nauseoso, a veces intenso,
• Helicobacter helmmanii. le siguen vómitos, que en sus primeros estadios son
• Flemonosa. alimentarios y se transforman después en acuoso-
• Micobacteriana. biliosos, con un alto contenido de moco. El vómito
• Sifilítica. alivia generalmente las molestias en gran número
b) Viral. de pacientes. El ardor puede ser continuo y no
c) Parasitaria. ceder con la ingestión de alimentos. La anorexia
d) Micótica (Cándida, histoplasmosis). es otro síntoma acompañante, por lo común
II. Gastritis crónica atrófica. transitorio; sin
1. Tipo A: autoinmunitaria (cuerpo y fundus).

168
embargo, se señala que la mayoría de los enfermos lución es fulminante, con mala respuesta al trata-
con este tipo de gastritis por H. pylori permanecen miento médico, por lo que es necesaria la gastrec-
asintomáticos. tomía.
El examen físico proporciona escasos datos y los La gastritis infecciosa aumenta en los pacientes
pacientes mantienen un buen estado general. La pal- inmunodeprimidos con SIDA, los cuales, además,
pación del epigastrio puede ser dolorosa. pueden presentar tuberculosis gástrica, e infección
Exámenes complementarios gástrica por citomegalovirus.
Prueba de secreción gástrica. Inicialmente hay un
aumento de la secreción ácida gástrica y luego hi-
poclorhidria, que en ocasiones dura hasta 1 año. GASTRITIS CRÓNICA
Gastroscopia. Tiene un gran valor, pues permite
observar la intensidad de la lesión de la mucosa, así Se caracteriza por un infiltrado inflamatorio de linfo-
como tomar muestra de biopsia para el estudio his- citos y células plasmáticas con pocos polimorfonu-
tológico y específico del microrganismo H. pylori y cleares y eosinófilos. De inicio se afecta la
confirmar el diagnóstico. superficie de la mucosa gástrica y la zona foveolar,
luego pro- gresa y se produce destrucción de las
Evolución glándulas, lo que conduce a la metaplasia de éstas
Una vez que cura la infección por H. Pylori, la ma- con marcada disminución de su número (atrofia).
yoría de los pacientes mejoran, pero otros evolucio- Clasificación
nan hacia la gastritis crónica.
Clasificación según el grado, extensión y localiza-
Tratamiento ción de los fenómenos inflamatorios
Gastritis superficial. Es la primera fase de la gastri-
Medidas generales. Debe prohibirse la ingestión de tis crónica; el infiltrado inflamatorio descrito más
café, bebidas alcohólicas y otras sustancias irri- arriba se concentra en la lámina propia de la
tantes. mucosa superficial, con edema y disminución de la
Medidas sintomáticas. Están destinadas a com- cantidad de moco que producen las células de la
batir los vómitos, el ardor y el dolor en el epigastrio. mucosa glan- dular.
• Suspender la vía oral hasta 2 h después del úl- Gastritis atrófica. El infiltrado inflamatorio alcan-
timo vómito. za la profundidad de la mucosa y llega a constituir
• Atropina: 0,5 a 1 mg por vía IM cada 6 h.. folículos linfoides. Lo que más la caracteriza es la
destrucción de las glándulas.
Después que cese el cuadro emético, hidróxido Atrofia gástrica. Es la última fase de la gastritis
de aluminio, 15 ml (1 cucharada) cada 4 h. crónica, donde la estructura glandular se pierde,
Medidas específicas. Para eliminar el H. pylori. ape- nas hay infiltrado inflamatorio o no existe, y
hay adelgazamiento de la mucosa, que al examen
• Antibióticos: Ver esquema de tratamiento anti- endos- cópico muestra los vasos sanguíneos que
biótico para H. pylori en el capítulo sobre “Úl- están por debajo. Unido a la atrofia glandular, se
cera péptica gastroduodenal”. encuentra una metaplasia intestinal: las propias
glándulas gás- tricas pasan a tener el mismo
Gastritis flemonosa aspecto que las de la mucosa del intestino delgado,
que se presentan en forma de parches o con
Esta gastritis bacteriana es una afección rara, grave, amplios agregados de célu- las caliciformes. Esta
que afecta la submucosa y la pared gástrica con ne- metaplasia intestinal es un fac- tor predisponente al
crosis hística y cuadro clínico de sepsis generaliza- cáncer gástrico.
da. Es producida por estreptococos, estafilococos, Clasificación según su distribución en la mucosa
E. coli y Proteus. El tratamiento consiste en la ad- gástrica y su patogenia
ministración de antibióticos específicos por vía EV,
así como las medidas generales necesarias. La evo- 1. Tipo A (de predominio en el cuerpo, autoin-
munitaria).
169
2. Tipo B (de predominio en el antro, relacionada células similares a las enterocromafines, por la
con infección por H. pylori). hipergastrinemia, que tiene efectos tróficos sobre
3. Tipo AB ( se afectan el cuerpo y el antro). dichas células, población celular endocrina que está
en la mucosa glandular del fondo y que puede pro-
Gastritis de tipo A vocar tumores carcinoides gástricos en la gastritis
atrófica.
La gastritis crónica atrófica autoinmunitaria es la
menos frecuente, afecta el cuerpo y el fondo del es- Evolución
tómago y respeta el antro. Se asocia a anemia perni- Los tumores carcinoides gástricos, de estar presen-
ciosa. tes, tienen una evolución insidiosa y provocan me-
tástasis, pero responden a la antrectomía, y los
Patogenia tumores multifocales, a la extirpación local.
Se ha planteado una patogenia inmunitaria o autoin- El riesgo de adenocarcinoma gástrico en los pa-
munitaria por la presencia en el suero de estos en- cientes con gastritis atrófica de tipo A y anemia
fermos con gastritis de tipo A y anemia perniciosa, per- niciosa, es 2 o 3 veces superior al de la
de anticuerpos contra células parietales y contra el población general.
factor intrínseco. Estos anticuerpos contra células
parietales son citotóxicos para las células de la mu- Tratamiento
cosa gástrica. Se señala que en la gastritis A los an- para la anemia perniciosa,
Aparte de la vitamina
ticuerpos séricos más específicos son contra el factor
B12
intrínseco, los cuales bloquean el lugar de captación no hay un tratamiento específico.
de la vitamina B12, agotan la concentración sérica y
los almacenes de ésta, y producen anemia mega- Gastritis de tipo B
loblástica. Es la más frecuente de las gastritis crónicas y
En los enfermos con anemia perniciosa, se en- afecta fundamentalmente al antro de los pacientes
cuentran destruidas las glándulas gástricas que con- jóvenes y la totalidad del estómago en los ancianos.
tienen células parietales, por lo que no pueden Ha reci- bido múltiples denominaciones: gastritis
secretar ácido clorhídrico. de predo- minio en el antro, gastritis por H.
pylori, gastritis ambiental. La incidencia de esta
Cuadro clínico enfermedad aumen- ta con la edad.
Se presentan las manifestaciones hematológicas y Se ha comprobado que H. pylori es el agente
neurológicas propias del déficit de vitamina B12. pro- ductor de la gastritis de tipo B, y existe una
relación entre la resolución de las alteraciones
Exámenes complementarios histológicas y la erradicación del germen. Es
Quimismo gástrico. Hay hipoclorhidria o anaclor- elevada la frecuencia con que se obtiene H. pylori
hidria, la cual es proporcional a la destrucción de en la gastritis crónica superficial y se demuestra
las células parietales y a la atrofia de la mucosa del menos bacterias en la gastritis atrófica. Existe un
cuerpo y el fondo gástricos, en los pacientes con estrecho vínculo entre la cantidad de bacterias y el
anemia perniciosa. grado de actividad de la gastritis.
Gastrina sérica. Hay hipergastrinemia secunda- Desde el punto de vista histológico, hay un infil-
ria a la anacidez crónica. Las células antrales libe- trado inflamatorio crónico de la lámina propia con
ran la gastrina de forma continua. Este aumento de invasión de la capa de células epiteliales por leuco-
la gastrina se encuentra también en los pacientes con citos polimorfonucleares.
gastritis de tipo A con aclorhidria o hipoclorhidria
sin anemia perniciosa. Patogenia
Endoscopia oral con biopsia. La muestra debe Aún no se conoce el mecanismo exacto mediante el
tomarse en varias zonas, debido a la distribución cual H. pylori produce las lesiones inflamatorias en
histológica de la gastritis atrófica de tipo A. Entre la mucosa gástrica; se plantea que este germen libe-
los resultados se encuentra una hiperplasia de las ra factores quimiotácticos que facilitan el traslado y

170
la agregación de los neutrófilos, así como que en la se encuentra un engrosamiento de los pliegues
membrana de la bacteria hay antígenos superficia- gástricos, que están cubiertos de pequeños nódulos
les que actúan como endotoxinas, unido esto a la con depresiones centrales, que se describen como
liberación de factores citotóxicos por el germen. gastritis varioliforme. El estudio histológico eviden-
Evolución cia un infiltrado linfocitario del epitelio superficial
gástrico y la presencia de fosas superficiales con
La gastritis crónica por H. pylori puede llevar a una una linfocitosis de linfocitos T pequeños y
gastritis atrófica multifocal, atrofia gástrica y a una plasmocitosis de la lámina propia. Esta gastritis se
metaplasia gástrica. La atrofia aumenta el riesgo de ha tratado con corticoides y cromoglicato sódico,
cáncer gástrico, y H. pylori es uno de los factores con diferentes respuestas.
que intervienen en su desarrollo; además, este ger-
men se relaciona también con el linfoma gástrico.
Cuadro clínico
Gastritis eosinófila
Se caracteriza por una gran infiltración de eosinófi-
Es asintomática o produce dolor en el epigastrio, fijo,
los en la pared del estómago, con eosinofilia perifé-
con ardor. Suele asociarse a una úlcera péptica, que
rica. Puede presentarse de forma aislada como una
presenta los síntomas característicos.
lesión del estómago o una gastroenteritis
Exámenes complementarios eosinófila. El síntoma principal es dolor en el
epigastrio, acom- pañado de náuseas y vómitos. En
Gastrina sérica. Es normal en la mayoría de los casos. la biopsia se en- cuentra un gran infiltrado de
Endoscopia con biopsia. La muestra debe tomar- eosinófilos que afecta todas las capas de la pared
se en varias zonas sospechosas y es diagnóstica del estómago o que está limitado a la mucosa, la
de submucosa o la muscular. Se daña más el antro y
la gastritis y de H. pylori. se encuentran pliegues pro- minentes de la mucosa
antral con edema, que puede ocasionar retención
Tratamiento gástrica por obstrucción del va- ciamiento gástrico.
Solamente para erradicar a H. pylori (ver esquema Hay buena respuesta al tratamien- to con
de tratamiento antibiótico para erradicar a H. pylori glucocorticoides.
en la úlcera péptica) si el paciente tiene úlcera péptica
asociada o linfoma gástrico.
Gastritis granulomatosa
Algunas enfermedades sistémicas, como la de
OTROS TIPOS DE Crohn, y las de causa infecciosa, como la
histoplasmosis, la candidiasis, sífilis y tuberculosis,
GASTRITIS se acompañan de granulomas en la mucosa
gástrica. Es necesario rea- lizar múltiples biopsias
Gastritis linfocítica y examen citológico de la mucosa para hacer el
Es de causa desconocida y algunos casos se obser- diagnóstico de la gastritis granulomatosa y
van en pacientes con esprúe celíaco. Por regla general descartar el tumor maligno. Los granulomas se
los enfermos están asintomáticos. En la gastroscopia observan en cualquier capa del estó- mago. No es
frecuente que la sarcoidosis, la gastritis
granulomatosa idiopática y los granulomas eosinó-
filos afecten el estómago.
171
17
GASTROENTERITIS AGUDA
En el tubo digestivo existe un gran número de mi- Concepto
crorganismos en concentraciones variables, ya que
Se llama gastroenteritis aguda al cuadro clínico
las características fisicoquímicas locales del tractus,
cuyo síntoma principal es la diarrea acompañada
la presencia de nutrientes y la capacidad de adhe-
sión a un epitelio interno, permiten una adecuación de vó- mitos, deshidratación de diversos grados y
a ese habitat a la gran cantidad de gérmenes ingeri- desequi- librio electrolítico, según la severidad del
dos con los alimentos. proceso y el agente causal.
La flora intestinal desempeña una serie de fun-
ciones fisiológicas beneficiosas para el hombre. Sus
Clasificación
componentes no patógenos son en un 99,99 % bac- Cualquier clasificación de este gran síndrome enté-
terias anaerobias, bacteroides, clostridiun, cocos, rico tiene que considerar:
bacilos grampositivos que incluyen bifodobacterium
y otros; complementada por la flora facultativa, de 1. El agente etiológico.
la que Escherichia coli es la más abundante, segui- 2. La alteración funcional.
da por Klebsiella, Proteus, enterococos y otras bac- 3. El tipo de alteración de la mucosa intestinal.
terias que se hallan en proporciones de 10 5-7/g de 4. El aspecto clínico práctico.
heces. En menor proporción se encuentran hongos,
parásitos, virus y enterovirus, que son transitorios Existen, además, una serie de enfermedades que
en el tubo digestivo. tienen características propias en su presentación, las
El tubo digestivo constituye un órgano multifun- cuales se conocen como gastroenteritis en grupos
cional que contribuye a las funciones de síntesis, específicos:
absorción de nutrientes y exorción; gracias a la mo-
1. Diarrea del viajero.
tilidad, los alimentos ingeridos progresan hacia
2. Síndrome del intestino gay (homosexuales).
el intestino, donde son sometidos a procesos enzi-
3. Toxinfecciones alimentarias.
máticos que se realizan a nivel del borde en cepillo
4. Diarreas en los pacientes inmunodeprimidos.
de las microvellosidades intestinales, donde se pro-
duce el proceso de absorción. 5. Diarreas inducidas por antimicrobianos.
A lo largo del colon tiene lugar la absorción del
En el cuadro 17.1 se presenta una clasificación
agua y la reabsorción de gran cantidad de la que se
etiológica de la gastroenteritis aguda.
escapa con las secreciones salivales, gástrica, biliar,
pancreática y duodenal; y por un proceso de exor-
ción, los residuos son eliminados en una deposición Clasificación funcional
diaria de consistencia sólida. Las alteraciones causadas por los enteropatógenos
Cuando existe un fallo de los mecanismos esta- tienen diferentes mecanismos de producción:
blecidos, se presenta un cuadro de diarreas o vómi- a) Osmótico.
tos, capaz de causar deshidratación acompañada de b) Estímulo para la secreción intestinal.
alteraciones del pH y los electrólitos, que en casos c) Alteración del transporte activo intestinal.
severos puede ocasionar trastornos metabólicos y d) Alteración de la permeabilidad intestinal.
muerte.
e) Alteración de la motilidad intestinal.

172
CUADRO 17.1 Clasificación según el tipo de alteración de la mu-
CLASIFICACIÓN ETIOLÓGICA
cosa
DE LA GASTROENTERITIS. MICRORGANISMOS
ENTEROPATÓGENOS INVASORES (I) Está en relación con el tipo de microrganismo;
Y TOXIGÉNICOS (T) algu- nos tienen acción toxigénica y otros invasiva,
y crean alteraciones anatómicas en la mucosa
Microrganismos causantes
intestinal.
Virus Protozoos
Clasificación clínica
Rotavirus Giardia lamblia
Según el aspecto clínico, las diarreas pueden ser:
Adenovirus (40,41) Endamoeba histolytica I
Agente Norwalk
a) Diarrea simple.
Dientamoeba fragilis ?
Astrovirus ? Balantidium coli I b) Disentería (sangre y moco en las heces).
Calicivirus ? Isaspora belli c) Diarrea persistente (por más de 14 días).
Coronavirus ? Cryptosporidium sp
Virus pequeños redondos Diarrea simple. El mayor porcentaje de los adul-
Bacterias tos que consultan por un cuadro agudo de diarreas
es debido a giardia o a shigela.
Salmonellas entéricas I Vibrio cholerae (01 y otros) T
Campylobacter yeyuni I V. parahemolíticos
Disentería. Este cuadro, causado para E. histoly-
Shigellas I V. alginoliticus tica y con frecuencia por shigelas y C. yeyuni, pre-
Yersinia enterocolítica I Aeromonas ? senta deposiciones con sangre, moco y pus.
Y. seudotuberculosis I Staphylococcus aureus T
Diarrea persistente. Ésta se extiende por más de
Escherichia coli IT Bacilos cereus T
Clostridium difficile T Clostridium perfrigens T 14 días, se ve tanto en niños como en adultos y la
producen Giardia lamblia, Shigella y Escherichia
Osmótico. La permanencia en la luz intestinal de coli enteropatógeno.
cantidades no usuales de solutos poco absorbibles y
activos osmóticamente, causa retención de agua. Etiopatogenia
Ejemplo: 5g de monosacáridos o 10 g de Los microrganismos enteropatógenos que causan
disacáridos retienen alrededor de 100 ml de agua, diarreas en niños y adultos, poseen propiedades
de esta mane- ra aumenta el contenido de líquido tóxi- cas que de una forma u otra afectan el estado
del intestino; cuando este es mayor que la cantidad fisio- lógico normal del intestino y alteran el
que puede ab- sorberse, sobreviene la diarrea. equilibrio entre la absorción y la secreción
Estímulo para la secreción intestinal. En la intestinal.
diarrea de origen toxigénico el incremento de la La acción patogénica es causada por un mecanis-
concentra- ción de AMPc aumenta la secreción y la mo invasor, como en el caso de las salmonelas,
cantidad de líquido en la luz intestinal por arriba de
shigelas, amebas, Escherichia coli
la capacidad de absorción.
enteroinvasor
Alteraciones del transporte activo intestinal.
(ECEI) y Campylobacter yeyuni, o por acción
Mecanismo parecido al osmótico, pero con gasto
toxigénica, como Vibrio cholerae, Escherichia coli
de energía, y que conduce al mismo resultado.
Alteraciones mayores de la permeabilidad del enterotoxigénico (ECET) y Staphylococcus aureus.
intestino. Reducen la absorción normal de Na+, glu- Las toxinas liberadas por estos microrganismos
cosa y agua a través de la entrada de pueden ser citotónicas, que producen alteraciones
macromolécu- las por vía paracelular o funcionales de los enterocitos sin lesión morfológica,
transcelular, y por microrrupturas epiteliales o citotóxicas, que causan alteraciones que llegan a
por agentes etiológicos invasores o por procesos la destrucción de las células epiteliales del intesti-
inflamatorios. no.
Alteraciones de la motilidad intestinal. El Los microrganismos invasores producen diarrea
aumento de la motilidad intestinal resulta en un con moco y sangre, cólicos abdominales y fiebre,
período insu- ficiente del contacto del contenido en tanto que los toxigénicos causan deposiciones
intestinal con la mucosa, lo que disminuye el frecuentes en chorro, con menos dolor y sin moco,
proceso de absorción normal. sangre ni fiebre; aunque en la práctica, los cuadros
no presentan características tan definidas como las
173
señaladas y es difícil diferenciar, en bases clínicas, Cuadro clínico
una enteritis invasora de una toxigénica. Gastroenteritis vírica. Los gérmenes encontrados
La gastroenteritis de causa vírica se presenta bajo con mayor frecuencia son el rotavirus y el agente
dos patrones epidemiológicos diferentes. Norwalk, como ya se expuso.
1. Forma epidémica. Se trata de un cuadro autoli- Las infecciones se caracterizan por deposiciones
mitado de 24 a 48 h de duración, de inicio líquidas abundantes, vómitos y fiebre. En los países
brus- co con diarrea, náuseas, vómitos y desarrollados las infecciones por rotavirus se pre-
sentan durante la estación más fría del año y en los
febrículas, en forma de brotes familiares que
subdesarrollados durante todo el año, aunque en
afecta a ni- ños de edad escolar y a adultos, y
ambos con mayor frecuencia durante la época más
en el que el agente Norwalk es la causa más
fría. El método más utilizado para el diágnóstico de
conocida.
rotavirus es la inmunoabsorbencia ligada a la técni-
2. Forma esporádica. Es ocasionalmente epidé- ca ELISA.
mica, afecta con preferencia a niños pequeños, Gastroenteritis bacteriana (Escherichia coli
aunque también a niños mayores y adultos, y enterotoxigénica). La ECET se produce en niños y
se caracteriza por un cuadro de diarrea de va- personas que viajan; está relacionada con el estado
rios días, acompañado de vómitos y fiebre, que higiénico-sanitario del país y tiene un período de
puede llegar a la deshidratación; su principal incubación de 1 o 2 días.
agente causal es el rotavirus. Existen cuadros leves, moderados y graves, que
se caracterizan por vómitos, diarreas, dolor abdo-
Dentro de los parásitos, los helmintos a veces minal, fiebre y a veces escalofríos.
pasan inadvertidos. Los protozoarios más frecuen- El diagnóstico se hace por medio de:
tes son Giardia lamblia y Endamoeba histolytica, y
otros. Actualmente se conoce que Criptosporidiun sp • Coprocultivo-tinción de Gram.
es un agente causal importante. • Medios de cultivo: agar, Mac Conkey.
• Métodos de radioinmunoensayo (RIA).
Mecanismo de defensa • Métodos inmunoenzimáticos (ELISA).
El tubo digestivo opone, frente a los microrganismos
Gastroenteritis bacteriana invasiva (salmonelas).
enteropatógenos, la barrera natural de su epitelio,
La salmonelosis tiene un período de incubación
poco eficaz para los patógenos primarios invasores,
de 8 a 48 h y es de aparición brusca, con vómitos,
y un conjunto de mecanismos de defensa, como son
diarreas, dolor abdominal de tipo cólico y fiebre.
la acidez de la secreción gástrica con capacidad
Las deposiciones pueden contener moco y sangre, y
microbicida; el moco que recubre la mucosa, donde el cuadro acompañarse de eritema nudoso o
se fijan los microrganismos; la motilidad intestinal, poliarteritis reactiva. En los lactantes, ancianos y en
la flora normal y la inmunidad humoral, que a tra- pacientes con anemia falciforme, suele causar me-
vés de la IgA bloquea la acción de las toxinas, y la tástasis en los huesos, y producir endocarditis en
penetración de los microrganismos invasores. per- sonas con lesiones valvulares. Es frecuente
Inmunidad. En la gastroenteritis vírica no están este tipo de infección en pacientes con SIDA.
bien establecidos los mecanismos inmunes implica- La mortalidad es baja, aunque puede tener un
dos en la protección y recuperación de las personas desenlace fatal en lactantes deshidratados, malnu-
afectadas. Algunos autores plantean que la produc- tridos y en pacientes con enfermedad de base.
ción de IgA a nivel intestinal es muy alta a los 7 días El diagnóstico se hace con coprocultivo en me-
de la enfermedad coincidiendo con la disminución dio selectivo.
y recuperación clínica de los pacientes, y que se lle- Gastroenteritis bacteriana por
ga al máximo entre 3 y 5 semanas. Cuando se pro- campilobacterias. El cuadro se presenta con
duce una reinfección, los títulos de IgA se elevan diarreas que duran entre 2 y 7 días, y no es
más rápidamente y se mantienen durante más tiem- infrecuente la presencia de sangre, vómitos, fiebre,
po, lo que se traduce en una infección benigna y dolor abdominal y malestar gene- ral. Se describen
asintomática. formas graves, con megacolon tóxi-
174
co, colitis seudomembranosa, hemorragias masivas Tratamiento
y adenitis mesentérica.
Tratamiento profiláctico
La mayoría de los pacientes tienen una evolución
La profilaxis va encaminada al cumplimiento de to-
favorable de modo espontáneo en menos de una se-
das las medidas epidemiológicas establecidas: her-
mana.
vir el agua, lavar bien las legumbres, tapar los
El diagnóstico se hace de varias maneras: depósitos de basura, lavarse las manos antes de in-
• Observación de las heces con técnica de Gram. gerir alimentos, no comer pescados crudos y obser-
• Observación del Campylobacter en campo os- var en pacientes bajo tratamiento con antibióticos
curo. la aparición de diarreas.
• Medios de cultivos selectivos.
• Técnica de filtración con filtros de nitrocelu- Tratamiento de la enfermedad
losa. En la diarrea aguda el tratamiento general e inespe-
cífico es el reposo y el aporte de líquidos, como té,
Diagnóstico caldos, jugos de limón, zanahoria, etc., y la reposi-
Diagnóstico positivo ción hídrica y electrolítica. A los pacientes grave-
El diagnóstico positivo se establece con los diferentes mente deshidratados se les administrará hidratación
cuadros clínicos descritos, según el agente causal parenteral EV con suero glucofisiológico, Dextro-
de la gastroenteritis, y las investigaciones comple- Ringer o Lacto-Ringer, en la cantidad y velocidad
mentarias que se señalaron en cada uno de ellos. necesarias, sobre todo a los ancianos. La rehidrata-
En los grupos específicos servirán de orientación ción oral se utiliza en enfermos con diarrea aguda
un tratamiento con antimicrobianos o 5 días después debida a bacterias productoras de enterotoxinas. El
de haberlo recibido, un viaje a países no industriali- tratamiento antibiótico en las diarreas bacterianas
zados, los signos de proctitis y de proctocolitis en es controvertido, y su uso no suele ser necesario en
un paciente homosexual, la ingestión de determina- los pacientes afectados de una enfermedad leve o
dos alimentos (setas, ciertos pescados, etc.), enfer- en fase de resolución, y sí debe indicarse en
mos con motivo para estar inmunodeprimidos. Todos aquellos con shigelosis, diarrea del viajero,
ellos son elementos que guiarán hacia el diagnósti- enterocolitis seudomembranosa, cólera y
co correcto. enfermedades parasita- rias (ver los capítulos
correspondientes).
Diagnóstico diferencial Los enfermos inmunodeprimidos, con tumores,
La intoxicación por metales pesados, como cobre, valvulopatías o prótesis valvulares u ortopédicas,
zinc, estaño y cadmio es capaz de confundirse con anemia hemolítica o pacientes en edades extremas
una gastroenteritis. de la vida, deben ser tratados con independencia de
la causa de la diarrea infecciosa.
Complicaciones Se deben evitar los agentes anticolinérgicos y
opiáceos para controlar la diarrea cuando se sospe-
A veces se presentan complicaciones, en dependencia
che la presencia de un agente enteroinvasor, porque
del agente causal; algunas de éstas son: deshidrata-
se puede prolongar la colonización o causar un íleo.
ción, trastornos electrolíticos, shock hipovolémico,
En pacientes afectados de diarrea del viajero que
shock séptico y sepsis generalizada. En el curso de
no presentan fiebre elevada, ni sangre o pus en las
la giardiasis puede ocurrir una malabsorción intes-
he- ces, están indicados con buenos resultados
tinal.
los antidiarreicos no específicos, tales como:
Pronóstico A. Absorbentes: Kaopectate, 45 a 90 ml del con-
Generalmente es favorable, aunque no tanto en pa- centrado por vía oral después de cada deposición
cientes inmunodeprimidos y en adultos mayores, diarreica.
cuyas condiciones nutritivas e inmunológicas no son Peptobismol: 2 tabletas (262 mg por tableta de
las mejores. bismuto); masticarlas o chuparlas cada 30 min
o 1 h, hasta un máximo de 8 dosis en 24 h.
175
B. Agentes opiáceos: Deben ser usados con pre- traindicado en casos con enfermedad hepática
caución en pacientes con asma, enfermedad pul- avanzada. Cada tableta contiene 2,5 mg de
monar crónica, hipertrofia prostática y glaucoma difenoxylato y 0,025 mg de sulfato de atropi-
agudo con ángulo cerrado: na. La dosis es de 5 mg por vía oral hasta el
1. Elixir paregórico: 4 a 8 ml por vía oral después control inicial de la diarrea.
de cada deposición líquida. 3. Loperamide: Tabletas de 2 mg; dosis de 2 a 4
2. Difenoxylato (Reasec): Es un inhibidor efecti- mg por vía oral después de cada deposición
vo de la motilidad gastrointestinal. Está con- diarrei- ca. El máximo de dosis es de 8 mg al
día.
176
18
ÚLCERA PÉPTICA GASTRODUODENAL
Concepto péptica se asocia a la presencia de
Helicobacter pylori, a malos hábitos dietéticos,
La úlcera péptica es una pérdida circunscrita de
abuso de inges- tión de té, café, bebidas
tejido que afecta las capas mucosa, submucosa y
muscular, de causa variada, localizada en las zonas alcohólicas, tabaquismo, uso indiscriminado de
del tubo digestivo que se encuentran en íntima rela- los AINE, salicilatos, etc.
ción con la secreción clorhidropéptica del jugo gás- No se deben desestimar los factores genéticos en
trico, por lo común entre el tercio inferior del esófagofamilias con afectación de varios miembros y en
y la primera porción del intestino delgado, y que aquellos pacientes del grupo sanguíneo O, en que se
puede aparecer en otras localizaciones en los lla- presenta con frecuencia.
mados síndromes de hipergastrinemias.
En este capítulo sólo se hará referencia a la úlce-
Etiopatogenia
ra péptica de localización gastroduodenal, por ser La etiología de esta enfermedad es multifactorial,
la más frecuente en la práctica médica. pues existen factores que defienden la integridad de
Epidemiología la mucosa gástrica y otros la agreden; el resultado
de un desequilibrio entre ellos es la aparición de la
La úlcera péptica gastroduodenal afecta aproxima-
úlcera péptica gastroduodenal.
damente al 10 % de la población mundial, con un
ligero predominio en los países subdesarrollados;
Factores defensivos
constituye, además, el 10 % de las causas de ingre-
Son aquellos que mantienen la integridad de la mu-
so en los hospitales de adultos, lo cual produce pér-
cosa, por sus propiedades estructurales y funciona-
didas económicas, ya que afecta con mayor
les, ante el daño que pueden producir sustancias
frecuencia a pacientes en edad laboral, sobre todo
secretadas por el mismo estómago y otras que pro-
entre los 35 y 45 años.
vienen del medio externo.
La úlcera gástrica es más usual en los hombres
La primera línea de defensa de la mucosa gastro-
que en las mujeres con una proporción de 2 a 1,
duodenal está constituida por el mecanismo de
mientras que la duodenal tiende a equilibrar la rela-
ción, con una frecuencia de 1,5 a 1. citoprotección:
En los EE.UU. la incidencia de úlcera péptica ha 1. Componente preepitelial: secreción de moco y
disminuido y se cree que sea debido al uso de anti- bicarbonato.
bióticos de amplio espectro por la población en ge- 2. Componente subepitelial: flujo sanguíneo de
neral y a mejoras en las condiciones higiénico- la mucosa gástrica.
sanitarias y en la dieta, así como a la disminución
3. Componente epitelial: resistencia de la mem-
del tabaquismo.
brana celular.
En Japón la úlcera gástrica es 5 a 10 veces más
4. Regeneración del epitelio mucoso.
frecuente que la duodenal, lo que guarda relación
5. Síntesis de prostaglandinas.
con la ingestión de irritantes de la mucosa gástrica.
En los países con bajos niveles socioeconómicos, el 6. Otros factores defensivos.
aumento de la tasa de morbilidad por úlcera
1. Componente preepitelial. Está constituido por
el moco gástrico, el cual se adhiere sobre todo al

177
epitelio de la mucosa, forma una barrera física a la El ácido clorhídrico producido por el tejido
acción del ácido clorhídrico y la pepsina e impide la glan- dular del fundus gástrico, mantiene un pH
retrodifusión de iones hidrógeno de la luz del estóma- ácido que permite la activación del pepsinógeno
go a la célula y viceversa. La secreción de bicarbo- a pepsina, hidrolisa algunos azúcares, estimula la
nato actúa en la neutralización de los hidrogeniones secreción de la hormona secretina por el duodeno y
amortizando un pH de 2 a nivel de la luz a un pH 7 es secretado por las células parietales bajo la
en la superficie celular, y se crea un ambiente influencia de mecanis- mos neurocrinos, paracrinos
alcalino que conserva la integridad epitelial. y hormonales (gastrina). La pepsina proviene del
2. Componente subepitelial. La eficacia del flujo pepsinógeno, que se ha- lla almacenado en las
sanguíneo en la mucosa gástrica mantiene el aporte células principales de la mu- cosa del fundus
de oxígeno y otros nutrientes que contribuyen a los gástrico, en respuesta a estímulos vagales (factor
procesos de cicatrización y curación; en casos de colinérgico), factores adrenérgicos y a otras
isquemia o de vasospasmo se producen ulceracio- enzimas intestinales: colecistoquinina, se- cretina,
nes en áreas de la mucosa gastroduodenal. péptido liberador de gastrina, etc. Su secre- ción se
3. Componente epitelial. Las células parietales son relaciona además con el pH que mantiene el jugo
las responsables de la secreción de moco y bicarbo- gástrico entre 1,8 a 3; su función es la de dige- rir
nato, limitan la retrodifusión de iones hidrógeno, en la luz gástrica las proteínas y permitir que el
favorecen la síntesis de las prostaglandinas y garan- ácido clorhídrico pase a la mucosa.
tizan la integridad de la mucosa gracias a su rápido El papel patogénico de Helicobacter pylori se
y continuo poder de regeneración. aclaró en 1983, cuando Warren y Marshall en Aus-
4. Regeneración del epitelio mucoso. Se realiza tralia describieron un micorganismo de estructura
en la base de las criptas gástricas donde se halla la espiral, flagelado, con actividad aerobia, oxidasa y
zona proliferativa del epitelio; si existe daño en la ureasa positivas, que habitaba debajo de la capa
mucosa, este proceso se acelera a la vez que es re- mu- cosa, en la superficie apical del epitelio
gulado por las prostaglandinas, la gastrina y el fac- gástrico o en áreas de metaplasia gástrica en la
tor de crecimiento epidérmico. mucosa del duodeno; su mecanismo patogénico
5. Síntesis de las prostaglandinas. Son compo- comienza con su propia presencia induciendo daño
nentes esenciales en la defensa de la mucosa gástri- mucoso por li- beración de citoxinas y citoquinas,
ca e intestinal y tienen acción citoprotectora al que al actuar so- bre la capa epitelial activan la
aumentar la resistencia de la mucosa gástrica frente cascada inflamatoria y producen desgranulación de
a estímulos mecánicos, ácidos, álcalis, ácidos biliares leucocitos y libera- ción de proteasas tóxicas; éstas
y otros elementos agresivos. incrementan los ni- veles de gastrina y
6. Otros factores defensivos. Se deben tener en somatostatina, aumentan al máximo la acidez y
cuenta: perpetúan el daño mucoso con cambios
a) El llamado freno duodenal, que consiste en la inflamatorios (gastritis o duodenitis) y
disminución del jugo gástrico por vía refleja ulceración que sobreviene como producto final de
cuando se introduce un ácido en el duodeno. este mecanismo.
b) La inhibición antral de la secreción cuando un Otros factores agresivos. En pacientes en los
ácido muy concentrado baña la mucosa. cua- les existe reflujo duodenogástrico,
c) La inhibición de la liberación de gastrina por antrectomía, etc., los ácidos biliares contenidos en
la propia hiperacidez que ella estimula. el jugo gástrico incrementan el flujo de ácido
d) El aumento del número de células parietales clorhídrico hacia la mucosa y la retrodifusión de
en la úlcera duodenal y la disminución de ellas hidrogeniones por au- mento de la secreción ácida
en la úlcera gástrica. y liberación de gastri- na; disminuye, además, la
barrera mucosa por reducción de la viscocidad y
Factores agresivos elasticidad del gel de moco, a la vez que el reflujo
En la génesis de la úlcera gastroduodenal se señalan ácido daña por acción directa las células epiteliales
el ácido clorhídrico, la pepsina, Helicobacter pylori gástricas.
y otros factores irritantes de la mucosa. El incremento de la fase antral de la secreción
ocasiona más secreción clorhidropéptica y, por
ende, mayor estimulación a la producción de
gastrina, con lo que ocurre un fenómeno de
retroalimentación.
178
La elevada secreción de ACTH y corticosteroi- Helicobacter pylori se localiza debajo de la capa
des causa una hiperclorhidria regulada por diferen- de moco sobre la superficie apical del epitelio gás-
tes vías que incluyen los estados de ansiedad (stress), trico o en las áreas de metaplasia gástrica en el
a través de la estimulación del eje hipotálamo-hipo- duo- deno, cuando es el agente etiológico.
fisario-suprarrenal.
Algunos medicamentos tienen una acción directa Cuadro clínico
sobre la secreción clorhidropéptica o producen la El interrogatorio tiene capital importancia en los
erosión de la mucosa por sí mismos, como son: sali- pacientes con úlcera gastroduodenal y prácticamen-
cilatos, AINE, etc. La cafeína y nicotina actúan te en él se basará la orientación diagnóstica, toda
similarmente a los anteriores. vez que el valor del examen físico casi siempre re-
sulta nulo.
Anatomía patológica El dolor predomina por lo común en el 90 % de
La úlcera gastroduodenal afecta varias capas de la los casos, aunque a veces, sobre todo en los ancia-
pared del estómago y duodeno (se ha demostrado nos, es una palidez intensa o una melena lo que lla-
que previamente existen cambios inflamatorios: ma la atención hacia esta afección. Se presenta en
duodenitis, con cierto grado de metaplasia en esa forma de crisis separadas por períodos de 15 días
mucosa que recuerda las estructuras del epitelio a 2 meses. Cada crisis dolorosa puede durar sólo
gástrico). Si se lesiona sólo la mucosa, resultan las unos minutos o varias horas, a menos que se alivie
llamadas erosiones gastroduodenales que acompa- con la ingestión de alimentos o antiácidos. El dolor
ñan a un daño agudo, como es el caso de las ulce- se localiza en el epigastrio, aparece en forma de ar-
raciones que se observan en la ingestión de dor, como una sensación dolorosa de hambre, como
salicilatos, etc. un calambre, o es quemante y se irradia al hipocon-
En el duodeno la ulceración asienta con mayor drio derecho o al mesogastrio en la úlcera
frecuencia en la cara anterior o posterior del bulbo. duodenal, y al hipocondrio izquierdo por debajo
Se pueden encontrar en la región posbulbar, ser úni- del reborde costal izquierdo en la úlcera gástrica.
cas o múltiples, y no es raro observar la llamada A veces per- manece fijo en el epigastrio sin
úlcera en espejo o kissing ulcer, en la que una úlcera irradiación.
está situada frente a la otra en la región del bulbo La aparición del dolor es posprandial tardío. A la
duodenal; por lo general son pequeñas, de menos úlcera duodenal se le ha atribuido el llamado ritmo
de 1 cm, y presentan forma oval o redondeada y con a tres tiempos (dolor-comida-calma) y a la gástrica
bordes precisos. el ritmo a cuatro tiempos (comida-calma-dolor-cal-
En el estómago asientan generalmente en la cur- ma). El valor diagnóstico de estos ritmos clásicos
vatura menor, debido a que es la zona más expues- ha perdido vigencia; no obstante, ante el dolor
ta a la acción del ácido clorhídrico y a la isquemia, ultratardío que aparece en la madrugada es lógico
la que más expuesto tiene el epitelio y la más pro- pensar en la localización duodenal. Más importante
pensa a que falle el mecanismo defensivo de la que los ritmos de Moynihan es recordar que el
mucosa. dolor ulceroso se alivia habitualmente con la
El diámetro de la úlcera es variable y alcanza ingestión de alimentos y cursa con períodos de
hasta 3 cm; sus bordes son bien definidos, edemato- calma absoluta que duran meses y hasta años.
sos, congestivos y algunos callosos en úlceras cró- El dolor de la úlcera se debe al descenso del um-
nicas de larga evolución. Asienta en una mucosa bral del dolor que se produce en las terminaciones
gástrica inflamada y posee un fondo amarillento- nerviosas de la base y bordes de la úlcera, y a la
blanquecino que representa el exudado fibrino- acción del jugo gástrico sobre estas estructuras in-
purulento que recubre al tejido necrótico, al de flamadas y congestionadas. Su excesiva duración y
granulación y a la última capa de tejido fibroso que resistencia a la terapéutica adecuada, debe hacer
origina la cicatrización. Para realizar un buen diag- pen- sar en una úlcera complicada.
nóstico, se deben tomar al menos 5 muestras de biop- La acidez es un síntoma que los pacientes refie-
sia para descartar la posibilidad de cambios de ren y relacionan con alguna comida específica, y se
degeneración maligna. puede acompañar de vómitos posprandiales o con
restos alimentarios o teñidos de bilis; en los casos
179
de incompetencia pilórica, éstos pueden originarse
por mecanismos reflejos: incoordinación de la muscula-
tura intrínseca, obstrucción por edema y congestión,
obstrucción espástica inflamatoria o cicatrizal, o por
ulceraciones con gran reacción inflamatoria en la
región pre o yuxtapilórica, que evitan el normal va-
ciamiento gástrico.
Debe señalarse que hay pacientes que cursan de
forma asintomática.
Examen físico
De forma habitual el estado general del enfermo se
conserva, pero suele detectarse palidez de aparición
gradual o brusca, según sea causada por sangramien-
tos ocultos y repetidos, o por uno masivo y brusco
(hematemesis y melena), respectivamente. En oca-
siones, durante las crisis intensas, el epigastrio y el
hemiabdomen superior aparecen contraídos e hi-
perestésicos; en caso de úlcera duodenal, la
hiperestesia se recoge a veces en la región inte-
rescapulovertebral. El hallazgo de bazuqueo gástrico,
palidez cutaneomucosa y contractura abdominal,
orienta hacia complicaciones observables en la le-
sión ulcerosa. Fig. 18.1. Nicho ulceroso de gran tamaño en la curvatura me-
nor del estómago.
Exámenes complementarios
Hemograma. Habitualmente es normal. En ocasio- cia o no de inflamación en el tejido que la rodea;
nes hay anemia hipocrómica ligera. movilidad de la mucosa subyacente, etc.
Heces fecales. Para buscar la presencia de sangre En las úlceras duodenales se puede ver el nicho
oculta. ulceroso, la convergencia de los pliegues o en oca-
Gastroquimograma. Permite evaluar la función siones una deformidad del bulbo duodenal en
motora secretora y la de evacuación del estómago. forma de hoja de trebol, (Fig 18.2) o simplemente
Las úlceras duodenales y prepilóricas cursan con la defor- midad del bulbo, que no es
hiperacidez e hipersecreción, mientras que las gás- patognomónica de úlce- ra duodenal, ya que se ven
tricas lo hacen con normoacidez, hipoacidez e hi- en las duodenitis, en los procesos cicatrizales, etc.
persecreción. Endoscopia oral. Tiene gran valor, pues permite
Gastroacidograma. Permite, además de los datos en más del 95 % de los casos visualizar el nicho
del gastroquimograma, evaluar el estado de la mu- ulceroso, su localización, precisar sus características:
cosa a través del número de células parietales fun- tamaño, caracteres de los bordes, si son superficia-
cionantes y basados en la propiedad que ejerce la les o profundos, si tienen signos de sangramiento;
histamina sobre las células parietales y su secreción, las particularidades de la mucosa que la rodea y a la
en relación con la estimulación basal de ácido y la vez realizar otros procederes: toma de biopsia,
estimulación máxima de ácido, sugerir si el proceso citología exfoliativa, toma de muestra para determi-
es gástrico o duodenal activo. nación de Helicobacter (test de ureasa, tinción de
Radiología. Muestra los signos directos e indi- Giemsa en el tejido enviado a anatomía patológica).
rectos de la úlcera gastroduodenal: la presencia del Cuando se sospecha la presencia de Helicobacter
nicho ulceroso (Fig 18.1) como una imagen por adi- pylori, también se puede realizar el test del aliento
ción, cuyo tamaño varía en dependencia del edema con C13 y C14–urea para su determinación, así
que rodea al nicho, situación de la úlcera y presen- como
pruebas serológicas.
180
Perforación. También puede ser aguda o crónica
en la cavidad peritoneal (abdomen agudo quirúrgi-
co) o en otra víscera (penetración); se debe sospe-
char en presencia de un dolor que pierde relación
prandial, se vuelve más intenso y no responde al
tra- tamiento habitual.
Síndrome pilórico. El paciente presenta vómitos
con restos alimentarios que no ceden al
tratamiento, con bazuqueo gástrico al examen
físico (Fig. 18.3).

Fig. 18.2. Nicho ulceroso del bulbo duodenal. Se observa,


ade- más, deformación del bulbo por la úlcera.
Diagnóstico Fig. 18.3. Imagen radiológica del estómago en un síndrome
Diagnóstico positivo pilórico provocado por una úlcera en la región prepilórica.
Estará fundamentado principalmente por una histo- Nótese la gran dilatación gástrica.
ria de dolor epigástrico que se alivia con la inges-
tión de alimentos y alcalinos, y se comprobará con Muchos autores dudan de la malignización de la
un examen radiológico y endoscópico oral. úlcera gástrica, ya que se dice que desde un princi-
pio son carcinomas.
Diagnóstico diferencial
Afecciones del segmento gastroduodenal: Hernia Pronóstico
hiatal con reflujo, duodenitis crónica, divertículos Es posible lograr la cicatrización de las úlceras pro-
gastroduodenales, neoplasias benignas y malignas ducidas por Helicobacter pylori al curar la infec-
(linfoma gástrico), parasitismo (giardiasis), gas- ción por este microrganismo, y no es necesario
tritis. continuar con el tratamiento antisecretor. Algunos
Afecciones que producen epigastralgia de origen pacientes tendrán recidivas; no obstante, el pronós-
reflejo: Pancreatitis crónica, disquinesia vesicular, tico mejora en la medida en que estas se eviten y
litiasis renal, etc. alejen.
Dispepsias no ulcerosas.
Tratamiento
Complicaciones Tratamiento médico
Sangramiento digestivo alto. Se presenta de modo El tratamiento médico de la úlcera péptica gastro-
agudo o crónico y se debe a la erosión de un vaso en duodenal está dirigido a aliviar los síntomas, curar
el fondo de la úlcera, ruptura del plexo capilar en la úlcera y evitar las recidivas y complicaciones.
los mamelones de granulación o por congestión en Reposo. El reposo debe mantenerse en mayor o
la zona ulcerosa o periulcerosa. menor grado, aunque durante las crisis ulcerosas

181
severas se hace absolutamente necesaria la hospita- Inhibidores de la bomba de protones. Su acción
lización del paciente. se debe a que se concentran en las membranas
Dieta. Evitar las comidas muy condimentadas, con tubulovesiculares acidificadas de las células parie-
exceso de calor o muy frías, así como los irritantes tales, donde se fijan en forma covalente a la enzima
de la mucosa gástrica; la alimentación debe ser a H+/K+/ATPasa, vía común final de la secreción áci-
base de vegetales frescos, proteínas y en menor pro- da; se recomienda como dosis de omeprazol 20 a 40
porción, los carbohidratos. Se recomienda la inges- mg diarios, preferiblemente al acostarse, durante 14
tión de un vaso de leche entre las comidas y a la días. Su efectividad mejora cuando se asocia a un
anti- biótico en pacientes H. pylori positivos.
hora de acostarse.
Sustancia de acción tópica. Sucralfato o
Suprimir el uso de tabaco, café, té y alcohol, que
subcitrato de bismuto (Bi) coloidal, que se adosa al
además de ser irritantes de la mucosa, producen hi-
fondo de la úlcera y sobre el tejido necrótico y
persecreción con hiperclorhidria en el jugo gástrico.
favorece la cica- trización; debe advertirse al
Erradicar los factores que desencadenan la crisis,
paciente que puede de- fecar oscuro por la
como situaciones de stress, ingestión de salicilatos,
metabolización del producto. La dosis
AINE y los microrganismos, como sería el tratamien-
recomendada es de 4 g al día durante 8 a 12
to específico de H. pylori en los casos en que se de-
semanas, repartidos en 1 tableta de 1 g antes de
muestre su presencia en la enfermedad ulcerosa.
cada comida y al acostarse.
En la actualidad se hace tratamiento con más de
Tratamiento medicamentoso
2 o 3 fármacos asociados buscando aumentar la
El principio básico ha sido, es y será el de disminuir
efec- tividad de éstos para lograr la curación del
el grado de acidez existente en el jugo gástrico; es
paciente, y usando antibióticos a los cuales es
por ello que se han usado los antiácidos, anticoli-
sensible H. pylori, ya que tienen la propiedad de
nérgicos (inhiben la secreción y la motilidad gástri-
penetrar la capa mucosa y actuar directamente en la
cas) y los antisecretores.
capa donde co- loniza el microrganismo. Se
Antiácidos. Hidróxido de aluminio (Alusil), 1 a 2
recomienda el esque- ma terapéutico que se
cucharadas 1 h después de las comidas y al acostar-
expone en el cuadro 18.1. El fármaco antisecretor
se. Produce constipación, en ocasiones muy moles-
se debe continuar más de 6 se- manas para asegurar
ta y peligrosa en los ancianos; en estos casos se debe
la curación.
asociar a la magma de magnesia.
Silogel. 2 tabletas chupadas o masticadas para que
ejerzan mejor su acción neutralizante 1 h después Tratamiento quirúrgico
Está indicado cuando hay complicaciones, crisis a
de cada comida y al acostarse.
repetición o intratabilidad. Se prefiere realizar la
Antisecretores. Bloqueadores de los receptores H2:
vagotomía ultraselectiva, que evita los síntomas
inhiben el efecto agonista secretor de la histamina
dispépticos posvagotomía truncal.
sobre las células parietales, pero con poca acción
colinérgica o secreción posprandial mediada por la El advenimiento de la cirugía endoscópica
gastrina. Ellos necesitan del medio ácido para ejer- endoluminal y endocavitaria por laparoscopia, per-
cer su acción, por lo que no se deben asociar con mite tener una visión más amplia y reducir ostensi-
antiácidos. blemente las complicaciones inmediatas y tardías
de la cirugía gastroduodenal a cielo abierto.
Cimetidina: 800 mg al acostarse o 400 mg 2v/día. Conducta que debe seguirse
Roxatidina: 150 mg por día por 6 semanas. ante una úlcera gástrica
Nizatidina: 300 mg al acostarse o 150 mg 2v/día.
Ranitidina: 300 mg al acostarse o 150 mg 2v/día. Cuando a un paciente con síntomas de úlcera gas-
Famotidina: 40 mg al acostarse o 20 mg 2v/día. troduodenal se le realiza una radiografía de estóma-
go y duodeno y ésta demuestra la presencia de un
En la úlcera duodenal se debe de utilizar la droga nicho ulceroso gástrico, se debe indicar una endos-
que se escoja durante 8 semanas, y en la gástrica, copia oral para determinar la localización anató-
por 12 semanas. mi ca de éste y observar sus características
macroscópicas; se posibilita, además, la realización
182
de métodos colorimétricos y la toma de biopsia (múl- En los pacientes cuya etiología está relacionada
tiple) para precisar si es un ulcus péptico, si hay cé- con la infección por Helicobacter pylori, la
lulas atípicas o no y si Helicobacter pylori está terapéu- tica combinada es efectiva en el 85 % de
presente como agente etiológico. De esta forma se los casos. Si una vez transcurridos 21 días con el
determina el manejo terapéutico del enfermo, que tratamiento médico no hay mejoría, se intentará de
dependerá en gran medida de la edad, localización nuevo, esta vez con doble dosis de omeprazol (40
de la lesión y respuesta inicial al tratamiento, de ser mg), amoxy- cillín y metronidazol, durante 21 días
éste el caso. más, con un estricto control endoscópico e
Si la biopsia demuestra células neoplásicas, el tra- histológico. Ya se se- ñaló el especial cuidado que
tamiento, por supuesto, es quirúrgico. Algunos gru- se debe tener con algu- nas localizaciones de la
pos de trabajo optan por la conducta quirúrgica, aun úlcera. El tratamiento médico no debe prolongarse
en casos con células atípicas, y sobre todo en las en caso de dudas acerca de la etiología o de la
localizaciones en la curvatura mayor, cara posterior permanencia de la lesión, cuando aquel se ha
y región prepilórica. realizado con toda seguridad, y hay que proceder
de inmediato a la valoración quirúrgica.
CUADRO 18.1
TRATAMIENTO ANTIBIÓTICO ESPECÍFICO PARA LA INFECCIÓN POR HELICOBACTER PYLORI

Terapéutica Fármaco 1 Fármaco 2 Fármaco 3 Observación Éxito

Triple Tetraciclina, Metronidazol, Subsalicilato Con las comidas Curac.


500 mg 4v/día 250mg 3v/día de Bi, 2 tab. por 14 días > 90 %
4v/día +1 antisecretor
Triple Tetraciclina, Claritromicina, Subsalicilato Con las comidas
500 mg 4v/día 500 mg 3v/día de Bi, 2 tab. por 14 días > 90 %
4v/día +1 antisecretor
Triple Amoxycillín, Claritromicina, Subsalicilato Con las comidas
500 mg 4v/día 500 mg 3v/día de Bi, 2 tab. por 14 días > 90 %
4v/día + 1 antisecretor
Doble Amoxycillín Claritromicina Con las comidas
750 mg 3v/día 500 mg 3v/día ___ por 14 días > 90 %
+ 1 antisecretor

183
19
CÁNCER GÁSTRICO
Concepto clínico, Bockus lo considera mínimo. La degenera-
ción neoplásica consiste en una alteración hereda-
Esta denominación incluye los tumores malignos de
ble. Debe tenerse en cuenta que la degeneración
distinto origen localizados en el estómago. Se pre-
neoplásica es una enfermedad de la célula que se
senta en pocos casos como secundario a otros pro-
trasmite a los descendientes de dicha célula.
cesos neoplásicos. En más del 95 % de los pacientes
es de origen epitelial.
Factores predisponentes
Descrito por primera vez por Avicena, médico
Se citan factores ambientales, donde se da impor-
persa, el cáncer del estómago se encuentra en todo
tancia a las características del suelo de ciertas
el mundo con relativa frecuencia, con grandes dife-
regio- nes, rico en compuestos orgánicos (carbón
rencias en las distintas regiones. Los países asiáti-
blando), en las cuales la enfermedad es 5 o 6 veces
cos, fundamentalmente Japón, son los más afectados;
más fre- cuente.
en América, Chile reporta un número de casos ma-
Factores dietéticos, basados en el papel carcinó-
yor, y en Cuba no figura entre las diez primeras cau-
geno de algunos alimentos, como el pescado ahu-
sas de muerte.
mado (Islandia), tortillas ahumadas (Costa Rica),
Frecuencia granos de kaoling (China); se da valor también en
este aspecto al hábito de consumir bebidas a tempe-
Es uno de los tumores más usuales del tubo digestivo, raturas extremas, a la excesiva ingestión de bebidas
aunque se consideró por muchos autores una dismi- alcohólicas, así como al hábito de masticar tabaco.
nución en su frecuencia de un 30 % en la pasada Se ha considerado de interés el grupo sanguíneo,
década de los 80. En los momentos actuales se obser- pues se observa un predominio del grupo A en va-
va un aumento del número de casos de neoplasia gás- rias series.
trica localizada en la región proximal del estómago. El antecedente de cirugía gástrica, sobre todo en
Edad. Aparece a cualquier edad, aunque su pre- procederes de tipo Billroth II, se estima un riesgo
sencia es relativamente rara en personas menores de padecer la enfermedad, con pronóstico malo.
de 30 años. La mayor parte de la literatura señala Estudios bioquímicos han demostrado la activi-
un aumento de su incidencia después de los 40 dad de la carboxilasa de ornitina, a la cual atribuyen
años, con peor pronóstico cuando tiene lugar en acción carcinogenética.
pacientes jóvenes. La edad promedio de presenta- El tratamiento con radiaciones y el antecedente
ción es 55 años. de linfoma han sido estimados como factores de
Sexo. Se considera un predominio del sexo mascu- ries- go en cuanto al cáncer metacrónico del
lino en una proporción de 2: 1. Se reporta también estómago. Otros factores predisponentes serían el
menor sobrevida en los varones. antecedente de úlcera gástrica, así como el reflujo
Raza. No representa un factor decisivo. aumentado de
bilis hacia el estómago.
Patogenia Se le ha conferido valor etiológico a la teoría
Herencia viral, dada la presencia del virus de Epstein-Barr
Para algunos investigadores el papel de la herencia con una frecuencia de 6,9 %.
es un factor predisponente. Desde el punto de vista En los momentos actuales se considera de gran
importancia como factor etiológico del carcinoma

184
gástrico la infección por Helicobacter pylori, bacte- El bazo desempeña un papel controvertido en la
ria flagelada gramnegativa, la cual determina en la inmunología del carcinoma gástrico. En estadios
mucosa gástrica un proceso inflamatorio crónico que avanzados hay marcado descenso en la actividad de
conduce a la gastritis atrófica y a la degeneración de los linfocitos, lo que apoya el papel
las células epiteliales. inmunodepresor que representa este órgano y que
se torna más in- tenso al avanzar el grado de
Lesiones precancerosas extensión de la en- fermedad.
Han sido descritas varias en el sentido de cierta pro-
babilidad estadística de progresión al carcinoma. La Anatomía patológica
afirmación: “Nunca se presenta carcinoma en un es- Por definición, los carcinomas son tumores epite-
tómago normal”, se ha basado en la hipótesis de que liales que crecen de varias formas, en estrecha rela-
ciertas lesiones benignas se consideran predisponen- ción con el grado de diferenciación del tumor:
tes al desarrollo de las malignas. La atrofia gástrica los diferenciados lo hacen hacia la luz del
por gastritis crónica, la anemia perniciosa y los órgano
pólipos gástricos (adenomas) son las más mencio- (Fig 19.1) y los indiferenciados tienden a infiltrar,
nadas. y a causa de un aporte sanguíneo inadecuado con
Tiene importancia práctica que los pólipos con al- teraciones en la secreción gástrica se produce
la ulceración (Fig 19.2).
un diámetro mayor de 2 cm a menudo son de natu-
raleza maligna.
Hipoclorhidria y anaclorhidria: Se ha descrito una
incidencia 4,5 veces mayor de cáncer gástrico en
enfermos con estas alteraciones.
Anemia perniciosa: El carcinoma gástrico se pre-
senta con una frecuencia 21 veces mayor que la es-
perada en pacientes con anemia perniciosa.
Con respecto a la úlcera gástrica benigna, que ha
sido considerada como factor predisponente al de-
sarrollo del carcinoma del estómago, no hay prue-
bas suficientes que demuestren que ella sea realmente
una lesión precancerosa, a pesar de que está com-
probada su relación con el reflujo duodeno-gástrico
y, en la actualidad, con el Helicobacter pylori y la
gastritis crónica derivada de éste.

Inmunología
Es un factor más que se debe considerar en la pato-
genia. En el ser humano se ha descrito un estado de
inmunodepresión inespecífica de cada tumor, prota-
gonizado por células que ejercen una acción
inmunodepresora sobre los linfocitos T del huésped.
Otro factor es el contenido de ADN en la población Fig. 19.1. Masa neoplásica voluminosa que crece proyectán-
dose en la luz del estómago.
celular neoplásica; un valor elevado de éste, así como
un alto porcentaje de aneuploidia, se observa en los Las células pueden contener un material coloidal
primeros estadios del cáncer gástrico y tiene un pro- gelatinoso o ser redondeadas, lo que recuerda las
nóstico peor; esto es menos frecuente en los esta- linfomatosas.
dios avanzados de la enfermedad. En la actualidad es muy aceptada la clasificación
Los estudios se pueden realizar en el preoperato- de Lauren para el cáncer gástrico (ICD-0151):
rio mediante biopsia.
1. Tipo difuso o gástrico. Se caracteriza por la
presencia de células tumorales individuales o
185
• De células en anillo de sello (mucocelular).
• Carcinoma indiferenciado (anaplásico) (ud).
• Carcinoma epidermoide (escamoso) (sq).
• Carcinoma adenoescamoso (as).
• Carcinoide (ed).
B. No epiteliales.
• Linfomas.
• Leiomiosarcomas.
• Linfosarcomas.
• Reticulosarcomas.
C. Tumores secundarios.
La mayoría de los tumores del estómago son de
origen epitelial; el adenocarcinoma es el más fre-
cuente y constituye el 95 % de éstos.
En la actualidad se considera el grado de
penetra- ción del tumor en la pared del estómago
como el elemento principal para determinar la
evolución y pronóstico del cáncer gástrico. De
acuerdo con lo anteriormente expresado, el tumor
puede estar lo- calizado en la mucosa o penetrar a
la submucosa, muscular propia y serosa o infiltrar
Fig. 19.2. Carcinoma ulcerado del estómago. estructuras ve- cinas.
El concepto de early cancer (cáncer gástrico
en pequeños grupos y sólo en casos ocasiona-
tem- prano) comprende aquellos tumores
les se observa formación glandular; el estroma
limitados a la mucosa o submucosa, independiente
es marcadamente fibroblástico. Hay producción
del tamaño de éste o de la toma ganglionar.
continua de mucina que infiltra de manera difusa.
Se considera cáncer gástrico avanzado cuando el
Desde el punto de vista macroscópico son tu-
tumor penetra hasta la subserosa, serosa o infiltra
mores por lo general ulcerados, localizados con
estructuras vecinas.
mayor frecuencia a nivel del cardias y fundus.
Para el cáncer gástrico temprano se estima la
Se ve en pacientes más jóvenes y su pronóstico
cla- sificación japonesa:
es peor.
2. Tipo intestinal. Se parece histológicamente a Tipo I. Cáncer protruido.
un tumor del intestino. En su morfología apa- Tipo II. Cáncer superficial.
recen glándulas con células columnares absor- a. Elevado.
tivas, con bordes en cepillo que segregan b. Plano.
mucina intestinal. Desde el punto de vista ma- c. Deprimido.
croscópico son por lo general polipoideos, lo- Tipo III. Cáncer excavado.
calizados con mayor frecuencia en la región
antral. Su pronóstico es mejor. Para el cáncer gástrico avanzado se mantiene vi-
3. Tipo intermedio. Con características interme- gente la clasificación de Borrman, modificada por
dias entre los dos anteriores. la sociedad japonesa de gastroenterología; se basa
en aspectos macroscópicos y tiene gran utilidad
Clasificación histológica del cáncer gástrico para el diagnóstico por endoscopia:
A. Epiteliales.
• Adenocarcinoma. Borrman 1. Localizado polipoide (crece hacia la
• Papilar (PAP). luz).
• Tubular (TUB). Borrman 2. Localizado ulcerado (ulceración con
• Mucinoso (MUC). reborde elevado).

186
Borrman 3. Infiltrativo ulcerado (ulceración li- Generalmente, las primeras manifestaciones ob-
mitada en un solo lado, el resto se servadas por el paciente corresponden a una
funde con la mucosa infiltrada). historia de dispepsia prolongada, a veces con años
Borrman 4. Infiltrativo difuso (no existe límite de dura- ción. Por lo común es un enfermo que
claro de la lesión con la mucosa nor- rebasa los 50 años, con antecedentes de salud, el
mal). cual refiere mo- lestia epigástrica hace más o
menos 1 año, que se agrava con la ingestión de
Propagación del cáncer gástrico alimentos. Se queja de anorexia, náuseas,
regurgitación y vómitos ocasio- nales. El paciente
Se han descrito cuatro mecanismos operantes en la
ha notado pérdida de peso y vi- gor, y se le
propagación del carcinoma del estómago. percibe una tumoración en el epigastrio. Estos
Propagación directa o infiltración. (Por contigüi- síntomas antes mencionados se consideran típicos
dad con el páncreas, pedículo hepático, bazo, colon del carcinoma gástrico, y en la mayor parte de los
y vesícula.) casos traducen un estado avanzado de la en-
Embolia linfática. Toma neoplásica de los grupos fermedad, posiblemente ya inoperable.
ganglionares sin encontrar células neoplásicas en los Es imprescindible tener en cuenta los síntomas
canalículos linfáticos, entre el ganglio y la pared del precoces.
estómago.
Penetración linfática. La lesión de órganos dis- • Molestia epigástrica. Es una sensación de ple-
tantes puede producirse por este mecanismo. Me- nitud o una epigastralgia ligera relacionada con
tástasis a la pelvis, cadenas aórticas, pulmón, ganglio una insignificante transgresión dietética, que
supraclavicular izquierdo por el conducto torácico puede acompañarse de flatulencia, intoleran-
(Virchow). cia a los alimentos que contienen celulosa y,
Embolia hematógena. No son frecuentes. Inva- con elevada frecuencia, a las carnes.
den pulmones, huesos, riñones, cerebro, bazo y piel. • Trastornos del apetito y náuseas ligeras. En
Manifestaciones clínicas y diagnóstico algunos casos se observa deseos de ingerir ali-
positivo mentos desacostumbrados. Puede presentarse
saciedad luego de ingerir poca cantidad de ali-
El problema fundamental de la curación del cáncer mentos.
gástrico se centra en el diagnóstico precoz, pero con
frecuencia ya se encuentra en estadios avanzados al Las náuseas, que al principio sólo ocurren luego
presentarse los primeros síntomas y en muchos ca- de comidas abundantes, aumentan su frecuencia y
sos se observa un retraso de 6 meses o más entre la en algunos casos llegan a ser la molestia mayor;
aparición de los síntomas iniciales y el diagnóstico. por esta causa el enfermo restringe su dieta.
Al describir los síntomas de este tipo de cáncer Conjuntamente con la anorexia, se observa pér-
casi todos los autores señalan una sintomatología más dida de peso y anemia.
bien indefinida, vaga, inespecífica, inclusive el pro-
pio paciente no sospecha de su enfermedad; aunque • Síntomas de obstrucción pilórica. Plenitud gás-
debe tenerse en cuenta que con relativa frecuencia trica que se hace progresiva hasta llegar a un
el síntoma inicial consiste en un bulto en el epigas- paroxismo de vómitos, al principio relaciona-
trio. Por estas características, tratar de clasificar las dos con la ingestión de grandes cantidades de
manifestaciones clínicas del cáncer gástrico como alimentos, situación que se hace progresiva.
tradicionalmente se ha realizado, en comienzo, pe-
ríodo de estado y fase final puede resultar difícil. Estas manifestaciones son propias de la neopla-
Para un intento serio de diagnóstico precoz de éste, es sia del tercio inferior.
necesaria una anamnesis minuciosa y una explo- • Síndrome ulceroso. Manifestaciones dispépti-
ración física detallada, hasta llegar a los estudios cas progresivas que se alivian con tratamiento
complementarios. antiulceroso.
187
Generalmente los enfermos que debutan con es- Como se ve, no existe desde el punto de vista
tas manifestaciones tienen peor evolución, lo cual clí- nico una forma de comienzo característica del
quizás esté relacionado con el retraso en su diag- cán- cer gástrico; tanto es así, que muchos
nóstico. pacientes acuden al médico por primera vez por los
síntomas ocasionados por las metástasis, entre los
• Síntomas de hemorragia digestiva. Una lesión que se men- cionan como más frecuentes: aumento
pequeña puede debutar con un sangramiento de volumen del abdomen por ascitis, ictericia por
abundante (melena y hematemesis). toma metastá- sica de los ganglios del hilio
hepático, dolor en el hipocondrio derecho por
hepatomegalia, lumbalgias o fracturas patológicas
Tiene importancia diagnóstica el hecho de per-
por metástasis óseas, sínto- mas respiratorios
sistir un sangramiento oculto 10 o más días después producidos por metástasis pulmo- nar, o bien
de un episodio hemorrágico intenso. distensión y dolor abdominal por carcinosis
• Síntomas de lesión del esófago distal. Las le- peritoneal. Es poco común el inicio con síntomas
siones del 1/3 superior gástrico, principalmente neurológicos por metástasis cerebrales.
las del cardias, determinan disfagia progresiva
así como regurgitación. En los primeros momen- Examen físico
tos puede presentarse sólo opresión retroster- La presencia de una masa abdominal localizada en
nal como única molestia (simula un dolor el epigastro depende del tamaño y localización del
anginoso). tumor, así como del biotipo del paciente. Este ha-
• Síntomas del colon. Con frecuencia, sobre todo llazgo al examen físico en la actualidad es menos
relacionado con la forma escirrosa del tumor, frecuente, pero cuando ocurre, sin lugar a dudas el
un síntoma precoz es la diarrea. A veces hay estadio de la enfermedad es avanzado.
constipación y molestias en el hemiabdomen El descubrimiento de una lesión metastásica en
inferior. Estas manifestaciones pueden corres- el examen físico tiene gran valor para el
ponder a una invasión del colon por el cáncer diagnóstico y para determinar el pronóstico. Son
gástrico. posibles las si- guientes:
• Al examen de la región supraclavicular izquier-
• Historia prolongada de dispepsia gástrica. Da- da, la presencia del ganglio de Virchow o de
das las características de esta enfermedad, en el Edwald.
interrogatorio debe estarse muy alerta para de- • Adenomegalias debajo del borde externo del
tectar cualquier cambio en los síntomas subje- pectoral mayor izquierdo en el examen de la
tivos. axila.
El desarrollo o la presencia de un cáncer del estó-
• En casos muy avanzados, se observa un tumor
mago en pacientes con afecciones que producen indurado a nivel del ombligo.
manifestaciones dispépticas, debe tenerse muy en • Al tacto rectal, un tumor del fondo de saco de
cuenta. Douglas (tumor de Blumer) localizado en la
cara anterior del recto.
• Presencia de anemia y palidez. No es raro que • Al tacto vaginal, un tumor localizado a nivel
la única alteración que observe el paciente sea del ovario (tumor de Krukenberg).
su palidez evidente, acompañada de astenia. • Al examen de la región inguinal, en casos muy
Con frecuencia se descubre pérdida de peso. avanzados, presencia de ganglios metastásicos.
• Síntomas de abdomen agudo. La primera ma- • Nódulos cutáneos, muy raros pero posibles, por
nifestación clínica de un carcinoma gástrico diseminación hematógena.
puede ser un cuadro de síndrome peritoneal por • Hepatomegalia irregular con nódulos de
perforación gástrica. En estos casos deben bus- consis- tencia dura, que suele acompañarse de
carse posibles manifestaciones clínicas presen- ascitis y de ictericia.
tes antes del cuadro agudo.
• En casos avanzados, edema en los miembros
inferiores con manifestaciones de insuficien-
188
cia cardíaca derecha, por metástasis pulmona- adición, que puede sobresalir de la silueta gás-
res. También se debe a déficit nutricional. trica.
• Lesiones purpúricas por trastornos hematológi-
cos provocados por invasión carcinomatosa de
la médula ósea.

Exámenes complementarios
Las nuevas técnicas de diagnóstico han modificado
el pronóstico del cáncer gástrico.
Radiografía de estómago y duodeno. A pesar del
tiempo continúa siendo la exploración “objetiva”
más valiosa para el diagnóstico. Tiene una sensibili-
dad de 80 %, se eleva al 90 % cuando se emplean
técnicas hipotónicas con doble contraste, que per-
miten el diagnóstico de tumores de 2 cm. Su exacti-
tud depende de la pericia del radiólogo, y requiere
de examen repetido en los casos dudosos.
La combinación de la fluroscopia con la radio-
grafía seriada eleva la calidad del estudio.
La exploración debe comenzar con pequeñas can-
tidades de sulfato de bario, que permite un estudio
cuidadoso mediante la fluroscopia del esófago, es-
tómago y duodeno utilizando técnicas de relieve y
placas seriadas; luego el estómago puede ser relle- Fig. 19.3. Defecto de lleno del antro, donde se observa con-
nado con bario para estudiar la motilidad y el vacia- juntamente una imagen por adición, causada por ulceración
miento del órgano. del tumor.
Las imágenes radiológicas más comunes son:
• El nicho o cráter ulceroso, grande o pequeño,
cuya verdadera causa sólo se determina por
biopsia. El aspecto es a veces en meseta.
• Úlcera o nicho ulceroso con menisco de
Carman: no sobresale del contorno gástrico y
queda in- cluido en la silueta del estómago
opacificado por el bario y separado del resto de
la imagen radiológica por un halo claro que
representa la masa tumoral que lo rodea. Los
pliegues de la mucosa gástrica no convergen.
• Imagen de defecto de lleno: es más frecuente y
su localización puede ser en cualquiera de las
tres regiones del órgano (Figs 19.3 y 19.4); su
extensión es variable.
El defecto de lleno está limitado por un borde
convexo hacia el interior del órgano de aspecto
irre- gular. Se observa rigidez de la zona por
ausencia de ondas peristálticas.

• Imagen combinada: Se ve un defecto de lleno


irregular dentro del cual aparece una imagen por Fig. 19.4. Cáncer infiltrante a nivel del antro gástrico.

189
Además de las imágenes clásicas, puede obser-
varse una irregularidad por defecto de lleno en el
tercio medio del estomago que da la imagen de es-
tómago en “reloj de arena”; o verse un estómago
pequeño, por retracción extensa, que da el aspecto
tubular con duodeno algo dilatado (imagen típica
de la linitis plástica).
En los tumores de la región pilórica se aprecia
un defecto de lleno que impide el paso del
contraste al duodeno, o bien una imagen de
desfiladero por obs- trucción pilórica incompleta.
En los tumores del tercio superior se detecta una
alteración de los contornos, o bien una imagen de
defecto de lleno a nivel de la cámara aérea que se
identifica mejor utilizando técnicas de doble con-
traste, mediante la administración de gas además
del bario, o empleando la técnica de polo superior
gás- trico, que toma la radiografía con el paciente
en po- sición de Trendelenburg.
Los tumores localizados en el cardias producen
un defecto de lleno irregular capaz de confundirse

Fig. 19.5b. Radiografía de estómago y duodeno: vista en la


posición de Nomoto, que permite precisar la morfología del
cardias.
con la imagen radiológica del tumor del tercio infe-
rior del esófago (Figs 19.5 a y 19.5 b).
Gastroduodenoscopia: La endoscopia oral tiene
un 98 % de sensibilidad, lo cual aumenta cuando se
le añade la citología y la biopsia. Es muy útil para
diferenciar lesiones benignas según la experiencia
del endoscopista, al observar la lesión. Pueden des-
cubrirse lesiones pequeñas que escapan a la
radiolo- gía. Permite, además, la toma de muestra
para biopsia en diferentes puntos de la lesión
observada.
Citología gástrica (exfoliativa): Se introdujo hace
más de 30 años, con gran aceptación. La precisión
del procedimiento depende de la experiencia del
citólogo llega a ser un método muy exacto cuando
se realiza con las condiciones necesarias. En térmi-
nos generales, se le atribuye una sensibilidad supe-
rior al 80 %.
Biopsia gástrica: Es el estudio que determina la
naturaleza exacta de la lesión.
Gastroquimograma: El cáncer gástrico se acom-
paña más a menudo de anaclorhidria o hipoclorhi-
Fig. 19.5a. Radiografía de estómago y duodeno: vista tomada
dria. Rara vez hay aquilia gástrica genuina y la
en la posición habitual, en la que se observa una discreta este-
nosis del cardias. inyección de histamina provoca, en la mayoría de
los casos, secreción de ácido. Se encuentra un in-

190
cremento del residuo gástrico, producto del trastor- Diagnóstico diferencial
no de la evacuación. La cantidad de ácido láctico No existe una enfermedad del estómago que no sea
está aumentada y se hallan bacilos de Boas-Oppler
capaz de simular los síntomas de un cáncer
en el contenido gástrico.
gástrico incipiente o avanzado.
TAC: A pesar de su gran valor diagnóstico en
Algunos tumores benignos son difíciles de dife-
sen- tido general, en el cáncer gástrico confronta
renciar, aun por los métodos de diagnóstico radio-
dificul- tades para estudiar preoperatoriamente el
gráficos y endoscópicos. Ocurre lo mismo con
tumor. Se le atribuye un 75 % de confiabilidad.
otras neoplasias diferentes al carcinoma, por
US diagnóstico convencional: Permite el diagnós-
ejemplo, linfomas, que en gran número de casos
tico de las metástasis y de los tumores de gran tamaño,
sólo la biop- sia de la pieza quirúrgica realiza el
en dependencia de la experiencia del ultrasonogra-
diagnóstico. Cualquier lesión gástrica,
fista. Ha sido reemplazado por el US endoscópico.
independientemente de su aspecto radiológico:
US endoscópico: Ofrece los mejores datos para el
regular o irregular, difusa o bien limitada, ulcerada
estudio preoperatorio; permite determinar con
o no, puede resultar de natu-
certeza el grado de penetración del tumor en la pa-
raleza maligna.
red gástrica, así como los ganglios linfáticos toma-
Además de los tumores, ofrecen dificultades para
dos y la entrada en órganos o estructuras vecinas.
el diagnóstico diferencial varios procesos patológi-
Laparoscopia: Es una prueba invasiva, necesaria en
cos del estómago, tales como: gastritis con hiper-
muy pocos casos si el resto de los exámenes son
trofia de los pliegues de la mucosa; prolapso de la
confiables. Se describe engrosamiento de la serosa,
mucosa pilórica; hipertrofia de la musculatura del
así como aumento de la vascularización e irregula-
píloro; várices del fundus gástrico; hernia hiatal;
ridad en determinada zona de la superficie del estó-
cuerpos extraños; lesiones inflamatorias crónicas,
mago; permite, además, visualizar metástasis
como las de origen tuberculoso, sifilítico,
hepáticas y peritoneales.
granulomatoso; la enteritis regional de
localización gástrica, etc.
Exámenes de laboratorio clínico
Especial atención ha merecido siempre el diag-
Heces fecales. Se puede detectar sangre oculta en
nóstico diferencial entre la úlcera péptica benigna
el 80 % de los casos.
del estómago y el carcinoma gástrico. Son impor-
Hemograma. Se presenta con frecuencia una ane-
tantes la evolución de la enfermedad, la respuesta
mia ferropénica, microcítica e hipocrómica. En los
al tratamiento rígido y la interpretación de los
casos avanzados se observa a menudo leucocitosis, y
estudios radiológicos y endoscópicos, incluyendo
eosinofilia en algunos pacientes.
el resulta- do de la biopsia, que aun tomada en
Conteo de plaquetas. En algunos casos muy avan-
varios sitios de la lesión tiene considerable margen
zados con invasión de la médula, se produce una
de error.
trombocitopenia.
Varias enfermedades extragástricas, en su mayo-
Química sanguínea. Se reportan ocasionalmente
ría malignas, resultan difíciles de diferenciar del
hiperglicemia e hiperazoemia.
cáncer gástrico; entre ellas, el carcinoma
Marcadores tumorales: Los estudios del conteni-
pancreáti- co, por su sintomatología y evolución; el
do gástrico, además de la anaclorhidria, permiten
cáncer del esófago abdominal, y el del colon en
determinar:
general, pero especialmente cuando está localizado
a. Elevación de la láctico deshidrogenasa. en el transver- so. Los tumores del bazo suelen
b. Elevación de la betaglucuronidasa. ofrecer dudas diag- nósticas.
c. Títulos bajos de prealbúmina. Algunos procesos patológicos benignos del pán-
creas (pancreatitis crónica), de las vías biliares
Marcadores tumorales muy ventajosos para el (co- lecistopatías), hepatopatías crónicas,
diagnóstico son: enfermedades inflamatorias crónicas del duodeno,
intestino delga- do (enteritis) y del colon, deben de
d. Inmunoglobulina proteica ácido sérica (IAP). e. ser consideradas en el diagnóstico diferencial.
Antígeno de carbohidrato (CA 19-9 y CA 123). f. Enfermedades neoplásicas, incluyendo linfomas,
Antígeno de polipéptidos hísticos (TPA). de órganos retroperitoneales, como el riñón y las
glándulas suprarrenales, pueden presentar síntomas
que es necesario diferenciar.
191
La anemia perniciosa, muy relacionada con la etio- dad se recomiendan las cefalosporinas en el
logía del carcinoma gástrico, debe tenerse en cuenta; preope- ratorio inmediato y al tiempo de la
en este caso la anemia megaloblástica, la anaclorhi- inducción de la anestesia.
dria histamino-resistente y las manifestaciones neu- El tratamiento quirúrgico con fines curativos tie-
rológicas permiten la diferenciación. ne que cumplir lo siguiente:

Pronóstico a. Resecar el tumor primario.


b. Obtener un claro margen de seguridad en la
Depende del diagnóstico precoz y del tipo histoló-
resección.
gico del tumor, aunque siempre es reservado por la
c. Resecar los nódulos linfáticos.
agresividad del proceso neoplásico.
La supervivencia, luego del tratamiento, está di- La operación indicada es la gastrectomía subtotal
rectamente relacionada con los factores antes men- (75 % del órgano); se recomienda la gastrectomía
cionados y varía en las diferentes regiones del total cuando la enfermedad se extiende a más de
planeta. En estadísticas japonesas se reporta hasta una región o cuando está localizada en el tercio
un 95 % de supervivencia a los 5 años en el early superior del estómago.
cancer (cáncer temprano). En todos los casos donde se intenta la cirugía
como tratamiento curativo, se debe realizar la
Tratamiento exéresis de los ganglios linfáticos regionales, lo
Sólo la cirugía ofrece posibilidades de tratamiento cual es el ele- mento fundamental para determinar
del carcinoma gástrico con dos objetivos fundamen- la radicalidad del tratamiento quirúrgico. En los
tales: casos avanzados, donde no es posible la cirugía con
intención curativa, está indicado el quirúrgico
1. Optimizar el potencial de confiabilidad. paliativo, lo cual incluye: resecciones paliativas,
2. Promover la mayor posibilidad de paliación en derivaciones gastrointestina- les, resección
el cáncer avanzado. endoscópica con rayos láser y caute- rización
endoscópica, como los procederes más
La valoración o preparación preoperatoria impli- utilizados.
ca un estudio detallado del estado del enfermo; está La quimioterapia está indicada en el posoperato-
indicada la antibioticoterapia preoperatoria por la rio del cáncer de estómago. Tradicionalmente se
proliferación bacteriana que existe en el estómago uti- lizó el 5-fluoracilo como medicamento de
del paciente neoplásico debido al pH elevado del elección. Luego fue recomendada la asociación de
contenido. Tradicionalmente se utilizó la combina- 5-fluora- cilo, mitomicín C y adriamicina. En la
ción de penicilina con estreptomicina; en la actuali- actualidad se emplea el tegafur por vía oral, de
acción parecida al 5-fluoracilo.
192
20
RECUENTO DE LA
FISIOLOGÍA DEL
HÍGADO
El hígado es el órgano más grande y desde el punto 2. Metabolismo de los carbohidratos.
de vista metabólico más complejo del cuerpo; está • Glucogénesis.
íntimamente relacionado con toda la fisiología del • Glucogenólisis.
organismo y pocas funciones se escapan de su con- • Depuración de glucosa plasmática.
trol y regulación. Sus enfermedades repercuten so- • Depuración de lactato plasmático.
bre la mayor parte de las funciones de nuestra
• Metabolismo de hexosas distintas a la
economía. Es necesario, por lo tanto, hacer un re-
gluco- sa (ejemplo: fructosa y galactosa).
cordatorio de sus funciones antes de iniciar el estu-
3. Metabolismo de los aminoácidos para la
dio de las enfermedades hepáticas.
sín- tesis de proteínas, hidratos de
Funciones del hígado carbono y lípidos.
4. Metabolismo de los ácidos grasos libres.
I. Síntesis de proteínas. 5. Litogénesis.
1. Albúmina. 6. Síntesis de urea.
2. Proteínas que interviene en la coagulación 7. Metabolismo de la bilirrubina (conjugación
de la sangre. y excreción de la bilirrubina).
• Fibrinógeno (factor I). 8. Metabolismo de las hormonas.
• Protrombina (factor II). • Insulina.
• Factores V, VII y X. • Glucagón.
3. Síntesis de otras proteínas.
• Hormona del crecimiento.
• Haptoglobinas.
• Glucocorticoides.
• Ceruloplasminas.
• Transferrinas.
• Catecolaminas.
• Globulinas A y B. • Tiroxina.
• Factores de complementos. • Hormonas esteroideas sexuales.
• Proteínas transportadoras de hormonas, IV. Funciones específicas.
ejemplo: globulinas transportadoras de 1. Secreción de bilirrubina y sales minerales.
esteroides sexuales. 2. Funciones reticuloendoteliales.
4. Síntesis de glucoproteínas. • Fagocitosis
5. Síntesis de proteínas estructurales y enzimas • Procesos de los antígenos (bacterianos,
víricos y dietéticos) absorbidos en el in-
intracelulares.
testino.
II. Síntesis de lípidos.
3. Función de almacenamiento.
1. Triglicéridos.
• Vitaminas liposolubles (A, D, K).
2. Colesterol.
• Vitamina B12.
3. Fosfolípidos. • Metales (hierro y cobre).
4. Lipoproteínas (de alta y muy baja densidad). 4. Mantenimiento del volumen plasmático y
5. Ácidos biliares. de la concentración de electrólitos.
III. Funciones metabólicas. 5. Conjugación, solubilización y desaminación
1. Oxidaciones bioquímicas. de los medicamentos.

193
Almacenamiento de sangre fagocítico. El grupo hem liberado se transforma en
El flujo sanguíneo hepático en condiciones norma- biliverdina por acción de la hem-oxigenasa y luego
les es de alrededor de 1 500 ml/ min, lo que represen- en bilirrubina por acción de la biliverdina
reductasa. La bilirrubina no conjugada circula en el
ta el 25 % del volumen minuto cardíaco, y exhibe
suero uni- da a la albúmina. Una proteína
una notable tendencia a mantenerse constante debi-
específica capta la bilirrubina y en la célula
do a que el flujo sanguíneo de la arteria hepática
hepática un 80 % se conju- ga con el ácido
tiene la capacidad de aumentar cuando ocurren des-
glucurónico y forma glucurónido de bilirrubina, y
censos del flujo sanguíneo portal. el 20 % restante se conjuga con otras sustancias.
Cuando se presentan hemorragias en alguna par- Se excreta con la bilis y llega al intestino donde se
te del organismo, la sangre de los sinusoides pasa a transforma en estercobilinógeno, el que es
la circulación general y contribuye a sustituir la pér- eliminado con las heces fecales. Una parte de esta
dida sanguínea. Esta glándula puede almacenar en- sustancia se reabsorbe en el intestino y pasa a la
tre 200 y 400 ml de sangre con sólo un aumento de 4 san- gre, de donde se expulsa nuevamente por el
a 8 mm de presión venosa hepática. Es por ello que intesti- no. Un 5 % es eliminado por la orina y
el hígado constituye un reservorio de sangre. recibe el nombre de urobilinógeno, el que se
Últimamente se ha demostrado que entre los he- oxida con la exposición al aire y da lugar a la
patocitos y la luz de los sinusoides existe un espacio urobilina. Hígado y proteínas
virtual (espacio de Disse), que permite la comuni-
El 80 % de los aminoácidos sufren transformacio-
cación entre ellos por la existencia de fenestraciones
nes en el hígado. Con respecto a las proteínas,
en el recubrimiento endotelial del sinusoide, cuyo
reali- za las funciones de desaminación,
tamaño no es fijo, sino que varía en función de los
transaminación y síntesis proteica. Con la
distintos estímulos fisiológicos y de esta forma re-
desaminación se priva a los aminoácidos de un
gulan algunos aspectos de la función hepática. grupo NH2, lo que da lugar a la formación de
La superficie interna de los sinuoides está cubier-amoníaco, pero como este es tóxico, el hígado lo
ta por las células de Kupffer, las cuales filtran transforma en urea. Mediante la transa- minación
partículas extrañas diminutas y el 90 % de las bac- un aminoácido puede convertirse en otro y
terias de la sangre que intervienen en los procesos resintetizarse en proteínas. Su función de síntesis
inmunológicos del hígado. proteica se hace evidente al producir una tasa
aproxi- mada de 12 g/dl de albúmina, lo que presenta
Secreción de bilis y excreción un 25 % de la síntesis hepática total de proteínas.
de bilirrubina hacia el tubo digestivo En Otras proteínas producidas por el hígado son los
el adulto se secretan de 700 a 1 200 ml de bilis cada factores de la coagulación: fibrinógeno (factor I),
24 h, constituida fundamentalmente por las sa- les protrombina (factor II) y los factores VII, XI, X y
biliares, aunque también están presentes concen- XII, así como inhibores de la coagulación.
traciones considerables de bilirrubina, colesterol, Hígado y glúcidos
lecitina y los electrólitos que hay en el plasma. Las El hígado actúa para mantener los niveles normales
sales biliares ocupan un lugar importante en la fi- de azúcar en la sangre mediante una combinación
siología hepática, pues facilitan la absorción de las de procesos (glucogénesis, glucogenólisis y gluco-
grasas (a las que emulsionan), las vitaminas neogénesis) que son regulados por varias
liposolubles y el calcio. La vitamina K activa los hormonas, que incluyen la insulina, glucagón,
factores de la coagulación VII, IX y X, cuyo déficit hormona del cre- cimiento y determinadas
crea trastornos hemorrágicos. catecolaminas.
A través de la bilis se eliminan sustancias endo- Los glúcidos son absorbidos en forma de mono-
bióticas y xenobióticas, función que se pierde en sacáridos y parte de ellos pasan al hígado a través
muchas hepatopatías. de la porta. Una vez en la glándula, son polimeriza-
Otro componente importante de la bilis es la dos y dan lugar a la formación de glucógeno
bilirrubina procedente principalmente de la lisis de (glucogénesis), el que se almacena para cuando se
los hematíes viejos en el sistema mononuclear necesite; en tal caso el glucógeno se desdobla y los
glúcidos (glucogenólisis) pasan a la sangre nueva-
194
mente en forma de glucosa, que es como son utiliza- hígado y se supone que forma las flavoproteínas.
dos. El glucogéno también se sintetiza a expensas La piridoxina (vitamina B6) interviene en la
de residuos no nitrogenados de aminoácidos descarboxi- lación de los aminoácidos en el hígado.
desaminados. Esto es la gluconeogénesis, que pue- Otro elemento del complejo B, el ácido
de llevarse a cabo con excesos de ácido láctico, gli- nicotínico, sufre un proceso de metilación e
cerina y ácidos grasos. interviene en los procesos de oxidación y
El hígado requiere de glucosa para impedir la in- glucólisis, ya que forma parte de la constitución
vasión grasa del hepatocito y es muy importante para de los fermentos Warburg y Euler. La vitamina
formar glucuronatos necesarios en su función desin- B12se almacena en el hígado y contribuye a la
toxicante.
síntesis proteica, eritropoyesis, etc. La vitamina C
neutraliza la acción glucogenolítica
Hígado y lípidos
de la tiroxina.
El hígado tiene gran importancia en el metabolismo
de los lípidos, ya que en él se almacena el 5 % de la Síntesis enzimática
grasa ingerida. Las grasas se degradan en el hígado
El hígado sintetiza la fosfatasa alcalina, globina de
para formar ácido diacético y betahidroxibutírico,
bajo peso molecular, y además excreta la producida
los cuales se oxidan mediante los hidratos de carbo-
en los huesos, riñones, etc.
no y pasan como tales a la circulación; causan aci-
dosis en casos de insuficiencia hepática. Las colinesterasas y las aminotransferasas tam-
En él se forman fosfolípidos y colesterina, im- bién se producen en el hígado.
portante esta última en la producción de ácidos Almacenamiento del hierro
biliares; también se producen ésteres que esterifican La mayor parte del hierro de la economía, excepto
al colesterol mediante una transferasa hepática. la cantidad que tiene la hemoglobina de la sangre,
Por último, aunque los ácidos grasos se depositan está almacenada en el hígado como ferritina. En la
como tales, una parte son utilizados en funciones célula hepática existen grandes cantidades de la
energéticas y metabólicas. pro- teína apoferritina, la que se combina con
cantidades de hierro. El sistema apoferritina-
Hígado y metabolismo hidrosalino ferritina actúa como amortiguador del hierro.
La acción del hígado sobre el metabolismo hidro-
salino es muy importante, ya que el agua y los elec- Función antitóxica o desintoxicante
trólitos sufren a nivel hepático un proceso de El hígado forma una especie de barrera o filtro que
normotonización; es decir, una vez ingeridos son
se interpone entre el intestino y el medio interno;
isoionizados e isotonizados antes de circular. El cloro
y el dióxido de carbono se retienen en él durante la junto con el riñón, constituyen los más valiosos
noche, lo que constituye una de las causas de la dis- mantenedores de la homeostasis o equilibrio de ese
minución de la diuresis durante el sueño. medio. Su acción desintoxicante se realiza a través
de la conjugación, oxidación, reducción y acetila-
Hígado y vitaminas ción, procesos todos que conducen a que el produc-
Todas las vitaminas están vinculadas de alguna for- to resultante sea de menos toxicidad que el
ma con el hígado, cuya integridad es necesaria para original. Así, conjuga sustancias como el indol,
un normal metabolismo de aquellas. escatol y otras, con sulfatos para formar
La provitamina A se convierte en vitamina A ac- sulfoconjugados no tóxi- cos y de rápida
tiva en el hígado y en el intestino en virtud de una
eliminación por la orina. Regulación
carotinasa, y se almacena en el hígado.
La tiamina (vitamina B1) es absorbida por el hí- hormonal
gado, donde se forma la carboxilasa (pirofosfato de Se sabe que el hígado inactiva varias hormonas, ta-
tiamina), que interviene activamente en el ciclo de les como la hidrocortisona, DOCA, aldosterona,
Krebs y favorece los depósitos de grasa en el híga- hormona antidiurética, estrógenos, andrógenos y la
do. La riboflavina (vitamina B2) se deposita en el tiroxina. Estas hormonas son degradadas y al final
conjugadas con el ácido glucurónico y eliminadas
por el riñón.
195
Clasificación de las enfermedades 2. Colangitis (séptica, cirrosis biliar primaria,
colangitis esclerosante primaria, medicamento-
hepáticas sa, tóxica).
Parenquimatosas Vasculares
1. Hepatitis (víricas, tóxicas, isquémicas, inducidas 1. Congestión pasiva crónica y cirrosis cardíaca.
por fármacos). 2. Trombosis de la vena hepática (síndrome de
a) Aguda. b) Budd- Chiari).
Crónica. 3. Trombosis de la vena porta.
2. Cirrosis. 4. Pileflebitis.
a) Alcohólica (portal, nutricional, cirrosis de 5. Malformaciones arteriovenosas.
Laennec). 6. Enfermedades venoclusivas.
b) Posnecrótica.
c) Biliar.
Principales pruebas que miden
d) Hemocromatosis. la función hepática
e) Tipos raros (enfermedad de Wilson), galacto- 1. Aspartato aminotransferasa (AAST-TGO).
semia, fibrosis quística del páncreas, deficien- 2. Alanino aminotransferasa (ALT-TGP).
cia de alfa-1 antitripsina). 3. Fosfatasa alcalina sérica.
3. Infiltrativas. 4. Bilirrubina.
• Glucógeno (enfermedad de Von Gierke). 5. Proteínas séricas totales.
• Hígado graso, tesaurismosis. 6. Tiempo de protrombina.
• Amiloidosis. 7. 5’Nucleotidasa.
• Linfomas, leucemias. 8. Gamma glutamil-transpeptidasa.
• Granulomatosis (idopática, sarcoidosis, tu- 9. Leucina aminopeptidasa sérica.
berculosis). Otras mediciones que evalúan las funciones hepá-
4. Lesiones expansivas. ticas
a) Carcinoma hepatobiliar, tumor metastásico. • Glicemia.
b) Abscesos (piógeno, amebiano). • Hierro sérico, capacidad total de saturación.
c) Quistes (enfermedad poliquística, equinococ- • Prueba de bromosulftaleína.
cus). • Lipidograma.
d) Goma sifilítico. • Determinación de amoníaco.
5. Disturbios funcionales relacionados con ictericia • Pruebas inmunológicas (alfa-1 antitripsina, an-
(hereditarios o adquiridos). ticuerpo mitocondrial y anticuerpos antinuclea-
a) Síndrome de Gilbert.
res y antimúsculo liso; antígeno de superficie).
b) Síndrome de Crigler-Najjar.
• Coagulograma.
c) Síndromes de Dubin-Johson y de Rotor.
• Ionograma.
d) Colestasis recurrente benigna del embarazo.
• Dosificación de 17-hidroxicorticoides y 17-
Hepatobiliares
ketosteroides.
1. Obstrucción biliar extrahepática (cálculos, este-
nosis o tumor).
BIOQUÍMICA DE LAS AFECCIONES HEPATOBILIARES

Afección hepatocelular Colestasis Procesos infiltrativos

Aminotransferasa ++o+++ N o+ N o+
Fosfatasa alcalina N o+ ++o+++ ++o+++
Bilirrubina T/D N o+++ N o+++ N o+
T. protrombina N o prolongado N o prolongado (responde a vitamina K) N
Albúmina
 En afecciones crónicas N N

196
21
HEPATITI
S
Numerosos elementos químicos y biológicos son bre del valle del Rift y del Crimean (Congo), a cu-
causa de daño hepático; entre ellos, los agentes yas afecciones no se les denomina hepatitis viral.
virales hepatotropos o llamados virus de la hepati- A continuación se describirán algunas caracterís-
tis, el alcohol y múltiples fármacos y toxinas tienen ticas de los principales agentes de esta entidad.
el papel preponderante.
Las últimas dos décadas han sido testigos de una Virus de la hepatitis A
explosión de conocimientos acerca de la hepatitis El virus de la hepatitis A (VHA) fue identificado
vírica, un importante problema de salud que afecta a por Feinstone y colaboradores en 1973 y aislado en
varios cientos de millones de personas en todo el cultivo de tejidos por Provest y Hilleman, en 1979;
mundo y que causa una morbilidad y mortalidad es un picornavirus esférico, de 27 nm (nanómetro)
considerables en la población humana, tanto la in- de diámetro, su estructura no incluye envoltura y
fección aguda como las secuelas crónicas, que in- está constituido en un 30 % por ARN y un 70 % por
cluyen, en al menos tres de los tipos de agentes
pro- teínas; su cápsula (capside) la componen
infectantes, la hepatitis crónica, la cirrosis y el cán-
múltiples copias de tres polipéptidos mayores
cer hepático primario, uno de los diez más frecuen-
denominados VP1, VP2, VP3, y uno menor, VP4; a
tes en todo el mundo.
esta peculiar conformación se deben las
características que dife- rencian al VHA de los
demás picornavirus, así como su comportamiento
HEPATITIS VIRAL antigénico y su estabilidad en di- ferentes medios,
AGUDA ácidos inclusive, por lo que se tras- mite por el
agua y los alimentos, resiste temperaturas
de 60ºC durante más de 1 h, deseca- ción y la
Concepto acción de agentes como éter y cloroformo. En
La hepatitis viral aguda es una infección sistémica presencia de prostaglandina E1, dexametasona o
de origen vírico, que afecta al hígado de forma pre- 5,6 dicloro 1-B-d ribofuramosyl benzemidazole,
dominante y que produce grados diferentes de ne- me- jora la replicación; por el contrario, se inactiva
crosis o inflamación de los hepatocitos. Etiología con el tratamiento prolongado con formaldehído,
radia- ciones ultravioleta, cloro o temperaturas de
Los virus de la hepatitis aguda se dividen funda-
95ºC du- rante 5 min. Este virus se ha podido
mentalmente en dos grupos: los virus principales de
cultivar in vitro en algunas líneas celulares, lo que
la hepatitis, cuya lista alfabética incluye una serie
demuestra que la maduración de los viriones
de agentes patógenos independientes (virus A, B,
C, D y E, así como los de la hepatitis no A, no E), y ocurre exclusivamente en el citoplasma de la célula
los secundarios, como el citomegalovirus, el Epstein- huésped; esto ha permi- tido, además, la
Barr, el de la varicela zóster, del herpes simple, ade- elaboración de una vacuna.
novirus, Coxsackie, del dengue hemorrágico, y hasta
exóticos, como Marburg, Lassa, Ebola, los de la fie- Virus de la hepatitis B
Sólo a partir de la década del 80 se ha logrado un
conocimiento detallado de la biología molecular de
este agente, del que Blumberg, en 1967, descubrió
su antígeno de superficie.

197
El virus de la hepatitis B (VHB) es un hepadnavi- virus ARN, cuyo tamaño aproximado es de 10 a 60 nm
rus, cuyo virión completo, denominado partícula de de diámetro (aunque hasta la fecha no se ha
Dane, tiene forma esférica y 42 nm de diámetro. visualizado), dotado de una envoltura lipoide ínti-
Posee una parte externa o cápsula compuesta por mamente ligada a su patogenicidad, pero que puede
proteínas, lípidos y carbohidratos, el antígeno de su- ser inactivada —lo que limita su capacidad de in-
perficie (HBsAg), un nucleocapside (core) que con- fección— con calor, formol, exposición a la luz
tiene un ADN parcialmente bicatenario de 3,2 kb ultravioleta y tratamiento con productos detergentes.
(kilobat) y dos proteínas (ADN polimerasa y la que Está constituido por una sola cadena positiva de
ayuda a la síntesis de cadena L[-], donde se localiza ARN de 9 379 nucleótidos, con dos regiones no
el antígeno del core [HBcAg]).Existe un tercer antí- codificantes en los extremos 5’y 3’, que delimitan a
geno del VHB, el HBeAg, que es una proteína del la zona de lectura abierta correspondiente al genoma.
nucleocapside. A su estructura compleja y a los errores que se
El ADN del VHB posee 4 genes o regiones (env, producen en su replicación, se debe la elevada tasa
C, P y X), cada una de las cuales codifica la síntesis de mutaciones del virus; se le conocen 9 genotipos
de una proteína vírica distinta, HBsAg, HBcAg, y más de 30 subtipos.
ADN polimerasa con características retrovirales y
una proteína de función aún no conocida, que pro- Virus de la hepatitis E
bablemente sea la transcriptasa del ADN. En 1983 se observó por primera vez el virus de la
hepatitis E mediante microscopia electrónica, en las
Virus de la hepatitis D heces de un paciente con hepatitis. Este tipo de
Es un virus defectuoso, observado por primera vez afec- ción se documentó por primera vez en Nueva
por Rizzeto en los núcleos de hepatocitos en pacien- Delhi en 1955, cuando se identificaron 29 000
tes infectados por el virus de la hepatitis B; requiere casos de hepatitis ictérica tras la contaminación
fecal del agua potable de la ciudad. Es una
para infectar una célula de la presencia de VHB u
partícula esférica, icosaédrica, de 27 a 34 nm de
otro hepadnavirus, es de pequeño tamaño —sólo
diámetro, pertene- ciente a los calcivirus, familia
mide 35-37 nm de diámetro—, su ARN es de cade-
de virus de una sola hebra de ARN, desprovisto de
na libre, polaridad positiva y 1,7 kb, habitualmente
envoltura, de polari- dad positiva, con un genoma
circular. Su envoltura es el HBcAg, junto a una pro- de 3 zonas abiertas y 7,5 kb y al menos dos ARN
teína que está unida al genoma y forma el antígeno subgenómicos. Son muy lábiles, lo que dificulta su
Delta (HDAg); así pues, el VHD posee dos antíge- estudio, pero al mis- mo tiempo muy similares sus
nos, el HBcAg y el antígeno Delta (HDAg), que for- cepas, lo que facilita el diagnóstico y la
ma la nucleocapside. inmunoprofilaxis. Se correspon- de con el virus de
la hepatitis no A, no B de trasmi- sión entérica.
Virus de la hepatitis C
La identificación del VHA y VHB mediante técni- Virus de la hepatitis no A-E
cas serológicas, hizo posible el desarrollo de ensa- Los agentes virales conocidos no cubren aún todos
yos de diagnóstico para la detección de ambos virus; los casos de hepatitis de presumible causa viral; el
no obstante, la aparición de casos de hepatitis aso- uso de inmunoensayos y de sondas moleculares su-
ciadas o no a transfusiones de sangre y que no eran giere que en una escala global, cerca de 10 a 20 %
causadas por éstos, siempre había sido frustrante al de los casos de hepatitis no A, no B, son causados
ser muy difícil atrapar al o a los agentes causales. por agentes de etiología no C, no D, no E.
La trasmisión de este agente a los chimpancés en Los primeros reportes del virus de la hepatitis
los últimos años de la pasada década del 70, per- GB se remontan a 1967, cuando un médico
mitió en 1988 a Michael Houghton descubrir el có- norteameri- cano, cuyas iniciales eran GB,
digo genético de una proteína viral, que podía ser presentó un cuadro de hepatitis aguda y cuya
usada para detectar anticuerpos en el suero de pa- sangre inoculada a monos Tamarín produjo en
cientes infectados. El descubrimiento del virus C ellos una enfermedad similar; ésta fue la primera
confirmó que casi la totalidad de las hepatitis cróni- vez en la historia que se lograba inocular con éxito
cas no A no B parenterales, eran causadas por este a un animal con un virus hepato- tropo humano.
Los estudios iniciales con el agente
198
GB fueron muy controvertidos, pero posteriormen- las letras del alfabeto para nombrar todos los agen-
te, cuando se dispuso de pruebas para caracterizar tes conocidos.
los virus A y B, se supo que el agente GB era dife-
rente y se consideró que podía ser el virus de la he- Epidemiología
patitis no A, no B, lo cual también se descartó más Antes de que se dispusiera de pruebas serológicas
adelante. para la identificación de los virus de la hepatitis, to-
En la década de los 90, utilizando tecnología de das las virales eran etiquetadas como “infecciosas”
ingeniería genética, se pudo demostrar la presencia o “séricas”. Sin embargo, existe superposición en
de dos moléculas distintas de ARN de naturaleza los modos de trasmisión y no es posible distinguir
viral, que se denominaron virus GBA y GBB, res- con claridad los diferentes tipos de hepatitis viral
pectivamente; más tarde se pudo encontrar, en hu- basándose únicamente en características clínicas o
manos, un tercer virus inductor de hepatitis, distinto epidemiológicas. La forma más segura de diferen-
de los anteriores, pero que guardaba cierta similitud ciar los distintos tipos se basa en pruebas serológi-
con ellos, y se le denominó virus GBC. cas específicas.
Casi al unísono, la firma Genelabs Technologies El virus de la hepatitis A es la variante de menor
Inc. de California aisló en el suero de pacientes con gravedad, su mortalidad es muy baja, sólo de 1/1 000
hepatitis, un flavivirus que denominó de la hepatitis y nunca evoluciona hacia la cronicidad. Tiene un
G, el cual resultó ser muy parecido y probablemen- período de incubación corto de 15 a 45 días, con
te similar al virus GBC. Las características del ge- una media de 30 días; en mitad de dicho período es
noma de los GBC los colocan en la familia que ocurre la infectividad máxima, la cual continúa
flaviviridae, con mucha semejanza, pero distinto al algunos días después del inicio de la ictericia y co-
de la hepatitis C. incide con la presencia del virus en la heces
Son virus que poseen envoltura y cuyo genoma fecales; es por ello que su trasmisión casi siempre
está constituido por un filamento sencillo de ARN es por vía fecal-oral asociada a la pobre higiene y
de aproximadamente 10 000 nucleótidos, con áreas al hacina- miento, y la trasmisión por vía parenteral
que codifican la síntesis de proteínas estructurales es excep- cional. Existe un solo tipo de antígeno
(core y envolturas), así como proteínas no estructu- del virus, de ahí que la primoinfección confiere
rales (NS1 a NS5), con un número total de alrede- una inmunidad que se considera que dura toda la
dor de 3 000 aminoácidos. vida. No se han identificado portadores crónicos
Un nuevo virus ADN, el virus TT (por las inicia- del VHA y la in- fección se trasmite sólo a partir
les del primer paciente del que fue aislado), ha sido de personas con in- fección aguda.
reportado en diciembre de 1997 en enfermos con Contrastando con el pronóstico benigno de la in-
hepatitis postransfusión en Japón. La infección por fección por VHA, la infección por el virus B causa
virus TT está presente en 1% de los donantes de san- la muerte anual de 250 000 personas, lo cual repre-
gre norteamericanos y es por lo general encontrada senta un 1 % de cuadros graves en los pacientes
en personas con enfermedad hepática, incluyendo que afecta y un curso a la cronicidad que oscila
cirrosis criptogenética e insuficiencia hepática ful- entre 1 y 5 %, hasta 10 % en inmunodeprimidos.
minante. Se ha tipificado como un virus ADN, posi- Tiene un período de incubación mucho más largo,
blemente de la familia parvovirus, lineal, de 3 739 entre 30 y 180 días, con una media de 60 a 90.
bases con 2 marcos de lectura (ORF1 y ORF2). Más Su único reservorio y fuente de infección es el
reciente, en julio de 1999, en Brecia, Italia, ha sido hombre y no existe otro tipo de fuente de infección
aislado un nuevo agente ADN, con una prevalencia en la natura- leza. Se estima que en el mundo
menor de 1 %, pero asociada a formas agudas y cró- existen entre 200 o 300 millones de portadores del
nicas de la enfermedad, y un 30 % de VIH positi- virus.
vos. Éste es el virus SEN-V. La principal vía de contagio es a través de sangre
No obstante, aún queda por identificar un grupo infectada con el virus, pero su presencia en el se-
de casos que en diversos países de Europa y EE.UU. men, la saliva y las secreciones vaginales, hace que
oscilan entre 4 y 10 %, y que no pueden ser clasifi- el contagio por vía sexual sea frecuente (30 %).
cados en ninguno de los tipos etiológicos reconoci- Tam- bién se ha aislado en las lágrimas, orina,
dos. Probablemente algún día no serán suficientes heces, su- dor, leche materna y otros líquidos
orgánicos, lo que da lugar a dos patrones de
trasmisión.
199
1. Trasmisión horizontal: La penetración del vi- Los mecanismos de trasmisión de la hepatitis D,
rus tiene lugar a través de la piel y mucosas por la forma de replicación del virus, son similares
por inoculación directa de sangre o hemoderi- a los de la B; la distribución es igualmente univer-
vados contaminados por VHB; por contacto con sal, pero con más endemicidad al sur de Italia, paí-
material infeccioso de heridas cutaneomucosas ses Balcánicos y Rusia, donde la trasmisión vertical
(material infectado, como hojas de afeitar, cepi- y el contacto sexual son los principales
llos de dientes, material hospitalario contami- mecanismos. En los países donde el nivel de
nado), o por contacto íntimo sexual, importante infección por VHD es bajo (países occidentales), el
vía de trasmisión entre varones homosexuales, principal mecanis- mo de trasmisión es
prostitutas y compañeros sexuales de portado- parenteral (drogadictos, hemofílicos y
res o por contacto íntimo intrafamiliar. hemodializados).
2. Trasmisión vertical o perinatal: Surge cuando Un 5 % de las hepatitis agudas producidas en los
países subdesarrollados están asociadas a una tras-
una mujer gestante contrae una hepatitis B agu-
misión entérica, de la que es responsable el virus E.
da o una portadora crónica queda embarazada.
La ruta fecal-oral ocurre a través de la ingestión de
En el primer caso, la posibilidad de que la ma-
aguas contaminadas con residuos fecales que con-
dre trasmita al hijo la infección depende del
tienen el virus eliminado por las heces, 2 semanas
momento del embarazo en que la adquirió antes de que aparezcan los primeros signos de en-
(el 60 a 70 % de los recién nacidos se infectan fermedad y persiste hasta 2 semanas después. Afec-
cuando la madre sufrió la enfermedad en el ter- ta primordialmente a jóvenes entre 15 y 40 años. El
cer trimestre). Si la madre es portadora, la po- período de incubación se estima entre 2 y 9 sema-
sitividad del HBeAg determina una posibilidad nas, con una media aproximada de 45 días. Cabe
de infección del 100 % para el niño, mientras destacar la elevada letalidad de la hepatitis E en las
que sólo será de 20 % cuando es el HBsAg el gestantes (20 %).
único positivo. La vía de trasmisión sugerida El nuevo agente de la hepatitis, el virus G, se
en ambos casos es perinatal. tras- mite a través de transfusiones de sangre y
hemode- rivados, pero con menor eficiencia que el
La prevalencia de positividad antiVHC en la po- VHC; es causante del 15 % de las hepatitis agudas
blación general es de 0,9 a 2 % , según el área geo- no A, no C. Es frecuente la coexistencia del VHC
gráfica. Las pruebas de despistaje en los bancos de y VHG, especialmente en adictos a drogas por vía
sangre han podido comprobar que muchos casos de EV. No se ha establecido hasta la fecha una
hepatitis C se adquieren en la comunidad y no sólo trasmisión perinatal o sexual; con igual modo de
en el ámbito de una transfusión de sangre. De este trasmisión (pero aso- ciación de la vía fecal-oral),
modo se reconocen como vías de trasmisión la pa- aunque sin precisar otros datos de epidemiología,
renteral (es la principal), que incluye la postransfu- se reportó el virus TT. El agente SEN-V, recién
sional, hemodiálisis y riesgo ocupacional (es mayor descubierto, tiene una forma parenteral de
en los trabajadores sanitarios, de laboratorio y aten- contagio.
ción directa al enfermo); los receptores de trasplan-
te y la utilización de instrumentos no estériles en Patogenia
procesos como tatuaje. La vía no parenteral incluye El VHA se replica en el citoplasma de los hepatoci-
la trasmisión sexual demostrada, la trasmisión in- tos, preferentemente en las áreas periportales; se
trafamiliar, que reporta una prevalencia mayor en cree que posee acción citopática directa y que la
los contactos familiares no sexuales que en la po- lesión hepatocelular se debe a la reacción
blación normal, y por último, la trasmisión vertical inmunológica del huésped. En una primera fase
demostrada en hijos de madres con elevados niveles existe una importante replicación vírica, que no
de viremia durante la vida intrauterina. El período llega a producir lesiones de necrosis significativas
de incubación en esta infección es muy semejante y se elimina virus por la bilis. En la segunda fase,
al del virus B, 15 a 160 días (media de 50), pero con coincidiendo con una ma- yor actividad
una progresión a la cronicidad y estado de portador inmunológica, disminuye la síntesis de nuevos
mayor. viriones, de forma que dejan de aislarse en las
heces y aparecen anticuerpos contra el antí- geno
del VHA. En esta fase de reacción inmunoló-
200
gica, en la que intervienen células naturales killer con transaminasas persistentemente normales, la
(NK) y linfocitos T citotóxicos, se produce el daño identificación de linfocitos citotóxicos con acción
hepatocelular. específica contra el VHC y la frecuente existencia
Si bien el hepatocito es la célula diana del VHB, de folículos linfoides en los espacios porta. La in-
éste infecta también a linfocitos y a células del sis- fección por el VHC tiene una gran tendencia a la
tema reticuloendotelial, las que a su vez facilitan la cronicidad.
llegada del virus al hígado. Los linfocitos T Como los ensayos serológicos del VHE son de
citotóxicos son sensibilizados contra los antígenos reciente disponibilidad, la patogenia de esta hepati-
de la nucleocapside (HbcAg y HBeAg), que se ex- tis aún no se comprende bien; sin embargo, se cree
presan en la membrana de los hepatocitos. que el virus entra al hospedero por vía oral, se
Para que los linfocitos T reconozcan a los antíge- repli- ca en un sitio no identificado que se presume
nos víricos, es necesaria la asociación de estos últi- sea el tracto digestivo, alcanza el hígado por la
mos a proteínas del sistema HLA. A su vez, la vena porta, se replica de nuevo en el citoplasma de
expresión de estas moléculas HLA está modulada los hepato- citos y es liberado en la bilis y la
por el interferón liberado por monocitos y linfocitos T sangre por meca- nismos no descifrados.
próximos a las células infectadas. Cuando la respues- Hasta el momento no hay información publicada
ta inmune es adecuada, se destruyen todas las célu- sobre los antígenos y las características de la res-
las infectadas por el VHB, y los viriones que se puesta inmune del hospedero a la infección por los
liberan a causa de la necrosis de los hepatocitos, son nuevos agentes.
neutralizados por los anticuerpos anti-HBS. Esto
impide su penetración en los hepatocitos y produce Anatomía patológica
la resolución de la infección. Si la respuesta inmune Macroscópicamente, el hígado por lo general está
es inadecuada, el VHB continúa replicándose en los aumentado de tamaño, pero cuando la enfermedad
hepatocitos no destruidos y la infección persiste. evoluciona con necrosis masiva aguda, el órgano se
El virus de la hepatitis D precisa de la existencia reduce. La superficie, lisa al principio, más tarde
del VHB para su replicación, relación que se pre- puede hacerse irregular y a veces nodular, según la
sentar en dos situaciones. forma clinicopatológica que adopte.
Coinfección: Consiste en la infección del hués- El color rojo vino del hígado varía de acuerdo
ped por ambos virus de forma simultánea. En pre- con la mayor o menor retención de bilirrubina.
sencia del VHD, la actividad replicativa del VHB es El bazo aumenta de volumen en la mayoría de
menor, ya que el primero utiliza parte de las proteí- los casos, así como los riñones. La mucosa del tubo
nas funcionales y estructurales del VHB, lo que fa- di- gestivo está adematosa.
vorece su aclaramiento por la reacción inmune. Microscópicamente hay fenómenos degenerati-
Sobreinfección: Aparece en aquellos individuos vos, necrosis hepatocelular y fenómenos regenera-
portadores de una infección persistente por el VHB tivos. La degeneración consiste en un abalonamiento
que resultan infectados por el VHD. de los hepatocitos (degeneración hidrópica) o bien
En ellos, el VHD halla un sustrato óptimo para su en su condensación (degeneración acidófila). En
replicación y se establece una infección crónica por este último caso es frecuente encontrar en los
ambos virus, que trae como consecuencia un aumen- sinusoides hepáticos restos celulares acidófilos,
to de la lesión hepatocelular. que se cono- cen con el nombre de cuerpos de
No se ha podido determinar todavía si el VHC Councilman. La necrosis afecta a todo el lobulillo,
posee una actividad citopática directa o si la lesión pero tiende a si- tuarse en las áreas centrolobulares.
hepática que produce está mediada por mecanismos Los hepatocitos necróticos son sustituidos por
inmunológicos. No obstante, es posible que ambos linfocitos y macrófa- gos, y posteriormente por
mecanismos actúen en conjunto. Entre los datos que pequeños colapsos de las fibras de reticulina. Se
sugieren citotoxicidad por el VHC, se destacan el observan fenómenos de re- generación celular
predominio de la afectación lobulillar y la mayor en forma de hepatocitos binucleados o
progresión de la infección en algunos pacientes in- trinucleados y en la fase de recupera- ción de la
munodeprimidos. Por el contrario, sugieren un me- hepatitis, macrófagos cargados de pigmen- to
canismo inmune la replicación del VHC en enfermos ceroide en las áreas centrales.
201
A pesar de que la biopsia hepática no permite el zan el tabaco; pueden experimentarse náuseas, vó-
diagnóstico etiológico de las hepatitis agudas, exis- mitos, dolor en el hipocondrio derecho, por lo co-
ten algunas diferencias histopatológicas según el mún de poca intensidad, constante y difuso, y en
agente causal: raras ocasiones tan intenso, que se confunde con
una enfermedad vesicular aguda; estos dolores
Hepatitis A: Necrosis periportal. Colostasis cen- probable- mente se deben a la distensión brusca
trolobulillar. del hígado por un intenso edema inflamatorio
Hepatitis B: Necrosis focales dispersas. Hepatitis (glaucoma hepá- tico de Henschen) o a la
C: Infiltrado inflamatorio del lobulillo. Folículos formación de focos infla- matorios subcapsulares.
linfoides portales con edema de los espacios Suelen aparecer cefalea, mal humor, dolores
porta. Displasias de los canalículos biliares. ocu- lares y síntomas de congestión nasal y de las
Aumento y variabilidad de la celularidad vías aéreas superiores, como dolor de garganta y
sinusoidal. Necrosis focales paucicelulares. tos.
Microvesiculación grasa de los hepatocitos. Con- Fase ictérica o período de estado: La coloración
gestión. Cuerpos acidófilos. amarilla de la piel y las mucosas es un síntoma
Hepatitis D: Necrosis focales extensas. Aumento importantísimo, aunque inconstante, de las hepatitis
de la celularidad sinusoidal. Microvesiculación agudas; son características la coluria y la hipocolia.
grasa de los hepatocitos. Cuerpos acidófilos. Cé- Paradójicamente, en esta fase el paciente mejora en
lulas en mórula. su estado general y va recuperando el apetito. Este
Hepatitis E: Necroinflamación con inmunorreac- período falta en las formas anictéricas de la
tividad. entidad; otras veces, la ictericia es latente, sólo
Hepatitis G: La biopsia es anodina o sólo mues- puesta de manifiesto por la hiperbilirrubinemia y
tra cambios mínimos. la copiosa urobilinuria.La duración oscila entre 2 y
6 semanas. Con la exploración se detecta una
Cuadro clínico hepatomegalia blanda y sensible, un bazo
De forma general puede decirse que los agentes cau- percutible y palpable en ocasiones, y adenopatías
santes de la hepatitis viral aguda, a pesar de ser muy cervicales posteriores, que, cuando son
diferentes, ocasionan un síndrome clínico similar, generalizadas, sugieren una infección por virus no
en el que no es posible precisar el agente causal, ni hepatotropos, como citomegalovirus o de Epstein-
por las manifestaciones clínicas ni por los resultados Barr. En casos severos puede evidenciarse
de las pruebas bioquímicas; además, este síndrome bradicardia e hipotensión arterial, debida esta a la
presenta un amplio espectro de manifestaciones, reducción de plasma; a veces hay eritema palmar y
desde formas asintomáticas hasta hepatitis fulmi- arañas vasculares.
nantes. Fase posictérica o período de convalecencia: Se
El cuadro clínico de la hepatitis viral aguda típica considera su inicio cuando desaparece el íctero. En
se caracteriza por cuatro fases: este período se describe el síndrome poshepatitis,
Período de incubación: Es el tiempo transcurrido que se caracteriza por debilidad y dolor en el hipo-
desde la exposición al virus hasta la aparición de los condrio derecho, acompañados de una recuperación
síntomas; depende del agente y de su infectividad. satisfactoria, que se evidencia por los valores nor-
Fase preictérica o período prodrómico: En este males de las enzimas y la bilirrubina. Éste dura de
intervalo se observan las primeras manifestaciones 2 a 3 semanas.
clínicas antes de la aparición de la ictericia; dura
entre 3 y 5 días, con manifestaciones agudas, como Manifestaciones extrahepáticas
en la infección por el virus A, o es más lento, larva- A pesar de la similitud clínica de los distintos tipos
do y prolongado, como en la hepatitis B. etiológicos de hepatitis viral, existen manifestacio-
El paciente se encuentra asténico, inapetente e nes extrahepáticas comunes a algunos de ellos; así,
intolerante a las grasas, presenta cambios en la sen- la hepatitis A presenta como una peculiaridad la
sación gustativa y del olfato, y los fumadores recha- aparición de diarreas al final del período de incuba-
ción, relacionada con la hipotética replicación
vírica en la mucosa intestinal.
202
Las manifestaciones extrahepáticas de la hepati- una historia epidemiológica que aporte el genio
tis B son debidas a la acumulación de inmunocom- epi- démico o la endemicidad, el sistema de
plejos formados por el antígeno vírico y su propagación y el período de incubación, y la
anticuerpo complementario; entre ellas se encuen- determinación de los marcadores serológicos,
tran: fundamentales para ello. Deben distinguirse de la
Piel: Acrodermatosis papular de Gianotti Crosti infección hepática agu- da diversas enfermedades
(más frecuente en niños) y erupciones urticariformes frecuentes. En la fase prodrómica hay que
por depósitos de inmunocomplejos en los pequeños diferenciarla de otros procesos infecciosos, como
vasos de la dermis. influenza, infecciones del siste- ma respiratorio
Sistema osteomioarticular: Fundamentalmente alto y las etapas prodrómicas de las enfermedades
artralgias de las pequeñas articulaciones de las ma- exantemáticas; la mononucleosis in- fecciosa y
nos y las muñecas, así como dolores musculares que cuadros abdominales agudos quirúrgicos,
recuerdan una miositis, pero con normalidad de las especialmente colecistitis y apendicitis aguda, o no
enzimas musculares. quirúrgicos, como gastroenteritis y pielonefritis. La
Lesiones vasculíticas: Pueden aparecer vasculitis presencia de rash urticariano, artritis y edema an-
necrotizantes con las características de poliarteritis gioneurótico, confunde a veces el cuadro en sus
nudosa con afección renal, y debe tenerse en cuenta ini-
cuando en una hepatitis aguda se presentan anemia, cios con una enfermedad del suero.
leucocitosis y síntomas organoespecíficos (dolores En el período de estado la leptospirosis es un
abdominales, artritis, hematuria, hipertensión arte- diag- nóstico diferencial de peso, mientras que la
rial, síndromes neurológicos). fase ictérica obliga a revisar las causas de
En la hepatitis C también se han descrito mani- ictericia, en particular las de tipo hepatocelular o
festaciones extrahepáticas, aunque no ligadas direc- las obstructi- vas cuando la forma colestásica es
tamente a la fase aguda de la enfermedad; entre las preponderante. Durante el embarazo es necesario
más frecuentes están la crioglobulinemia mixta esen- descartar la
cial tipo II, síndrome seco, poliarteritis nudosa, glo- metamorfosis grasa aguda del hígado.
merulonefritis y trastornos hematológicos del tipo
Formas clínicas
de la anemia aplástica y agranulocitosis. Secuelas
1. Hepatitis inaparente: La caracteriza una au-
y complicaciones sencia de síntomas subjetivos y objetivos, y
Son frecuentes la hiperbilirrubinemia poshepatitis, cursa sin que el paciente se percate de que
probablemente por déficit transitorio o permanente está enfermo; es la forma característica de la
de glucuroniltransferasa como consecuencia del daño hepa- titis por virus C en el 80 % de los casos.
hepático o por trastornos de la captación enzimática 2. Hepatitis anictérica: Es la más común de las
activa (Gilbert poshepatitis); así como el síndrome hepatitis virales. Los síntomas son semejantes
poshepatitis, rico en síntomas subjetivos, pero con a la forma ictérica clásica, pero con ausencia
pruebas de función hepática y biopsia negativa, co- de íctero. Su evolución a la cronicidad es
mún entre intelectuales. parti- cularmente común en las ocasionadas
La complicación más temida es la forma fulmi- por el vi- rus B. El diagnóstico se
nante; sin embargo, debe tenerse en cuenta la evolu- sospecha sólo en condiciones epidémicas en
ción a la cronicidad de algunos tipos etiológicos e pacientes expues- tos a una infección
incluso a la cirrosis poshepatitis y al cáncer prima- conocida; con frecuencia está presente un
rio del hígado. síndrome seudogripal artro- miálgico o una
hepatomegalia dolorosa.
Diagnóstico Esta forma clínica no significa en modo algu-
El diagnóstico de la hepatitis vírica se basa en los no benignidad; puede sufrir las mismas com-
rasgos característicos de la historia clínica, el exa- plicaciones que la ictérica, aunque parece
men físico y las pruebas de función hepática, y lleva tener una tendencia más acentuada hacia la
implícito el elemento etiológico que se establece por comple- ta resolución.
3. Hepatitis colestásica: Típicamente cursa con
intensa ictericia y es muy persistente; suele te-
ner un desarrollo prolongado, así como una
clí- nica semejante a la co lestasis
(prurito,
203
bradicardia, acolia y coluria). Es más frecuen- ricia, se habla de hepatitis fulminante o insuficien-
te después de la edad media de la vida y aún se cia hepática hiperaguda. Si la encefalopatía aparece
discute si puede evolucionar hacia la cirrosis entre las 2 y 8 semanas, tenemos la hepatitis
biliar o si estas cirrosis biliares, que de manera subful- minante o insuficiencia hepática aguda, y
aparente resultan de la evolución de una hepa- en el caso en que se presente de forma tardía (más
titis colestásica, son cirrosis biliares primarias. de 8 sema- nas tras la ictericia), se utiliza el
Es común en la hepatitis A del adulto. Son datos término de insufi- ciencia hepática subaguda o el
muy importantes de laboratorio la hiperbilirru- anglosajón de late onset hepatic failure.
binemia conjugada y el aumento del colesterol
total, de la fosfatasa alcalina y de la gamma- Exámenes complementarios
glutamil-transpeptidasa. 1. Patrón bioquímico de lesión
4. Hepatitis prolongada: Es consecuencia de un • Trasaminasas: La alteración más constante es
período prodrómico o de un período de estado la elevación de las transaminasas, de 10 a 40
prolongado; en otros casos, una vez alcanzada veces su valor normal; de forma característica,
la mejoría clínica y de laboratorio, aparece una la aspartato aminotransferasa o TGP constituye
reagudización. Se considera que el curso es pro- la enzima típica del patrón de necrosis. La
longado cuando hayan pasado al menos 4 me- cuan- tía de su elevación carece de valor
ses, aunque en ocasiones llega a 12 meses, e pronóstico y no está relacionada con la
incluso más tiempo, sin que se pueda hablar gravedad de la hepa- titis viral aguda.
aún de hepatitis crónica. Es frecuente en las Aumentan durante el período de incubación
hepatitis A (5 a 8 %) y siempre evoluciona ha- tardío y se mantienen altas de for- ma
cia la curación; por el contrario, en la hepatitis constante una vez que aparecen los sínto-
por virus C, la recurrencia entraña un elevado mas, para descender después lentamente.
riesgo de evolución a la cronicidad. • Relación TGO/TGP (índice de D‘Reetis): Se
5. Hepatitis aguda recurrente o recidivante: Se ha empleado como índice pronóstico de la
refiere a la aparición de nuevos síntomas des- hepati- tis viral aguda severa. Una relación
pués de una al parecer curada, incluida la entre 0,31 y 0,63 indica evolución benigna,
reaparición del íctero y elevación de las tran- mientras que entre 1,20 y 2,26 señala el
saminasas. desarrollo de necro- sis hepática fulminante y
6. Hepatitis grave: Son los casos de hepatitis muerte del paciente. La relación entre 0,64 y
ictérica que presentan criterios de gravedad, 1,19 no es concluyente para el pronóstico.
como ascitis, hipoglicemia o afectación severa • Lipidograma: Los lípidos plasmáticos totales,
del estado general. El examen histológico re- triglicéridos, fosfolípidos y lipoproteínas están
vela necrosis multilobulares o una necrosis con- elevados. Los niveles séricos de colesterol
fluente con puentes de necrosis. total aumentan ligeramente, aunque la
7. Hepatitis fulminante: Es la complicación más proporción co- lesterol-ésteres suele estar
temida de la hepatitis aguda y se debe a la ne- deprimida en la fase inicial. El colesterol total
crosis masiva o submasiva del parénquima he- en el suero está dis- minuido sólo en los casos
pático. La incidencia es de 0,5 a 1 % de las graves en que se afecta su síntesis y su
ictéricas. Es muy infrecuente en las hepatitis A esterificación.
y C, más común en las B (sobre todo en la 2. Patrón bioquímico de colestasis
coinfección B+D y en la infección por el • Gammaglutamil-transpeptidasa: Es una enzi-
mutante E minus) y en la E, en mujeres emba- ma ligada a la membrana del hepatocito cuya
razadas. mayor actividad se encuentra en las células de
las vías biliares y las de Kupffer. Se eleva en la
La insuficiencia hepática aguda grave se define
citólisis y en la colestasis, pero más en ésta. Es
como la presencia de encefalopatía hepática y dis-
un indicador sensible de enfermedad hepática
minución del tiempo de protrombina por debajo
y biliar. Aumenta menos que las
del 40 %, en un paciente con hígado sano. Si ocurre
transaminasas, pero es la última en volver a la
durante las 2 semanas desde la aparición de la icte-
normalidad, por lo que pudiera ser un útil
indicador de recupe- ración.
204
• Fosfatasa alcalina: Suele ser normal y estar • Orina: Pigmentos biliares: se pone en
ligeramente elevada en los pacientes con he- eviden- cia el aumento del urobilinógeno
patitis viral aguda típica; en las formas coles- urinario, así como la bilirrubinuria, que en
tásicas llega a exceder el doble de su límite la etapa de convalecencia desaparece
superior. Es menos específica que la gamma- antes que la hi- perbilirrubinemia. En el
glutamil-transpeptidasa, pues se altera en el em- estudio del sedimen- to aparecen a veces
barazo normal y en pacientes con enfermedades albuminuria y cilindruria discretas.
óseas. • Marcadores virales: Como consecuencia
3. Patrón de eliminación de metabolitos de la infección viral se produce una
• Bilirrubina sérica: Está aumentada en los ca- respuesta serológica que es específica de
sos de hepatitis ictérica (ambas fracciones), aun- cada virus, y que se hace evidente a través
que la directa o conjugada por lo común de marcadores, algunos de ellos de fácil
predomina. En la mayoría de los enfermos los determinación y ase- quibles a cualquier
valores más altos se hallan en el momento en institución, y otros de ob- tención más
que comienzan a mejorar los síntomas clínicos. compleja, disponibles sólo para
De manera habitual disminuye entre la 3ra. y 6ta. instituciones más especializadas.
semanas, aunque en algunos casos hay exacer-
baciones entre la 10ma. y la 12ma. El manteni- MARCADORES VIRALES EN LAS HEPATITIS
miento de valores elevados, principalmente a
Anti-VHA Anticuerpos totales frente al virus A
expensas de la fracción directa, o un gran au-
(IgG o IgM).
mento al inicio del cuadro clínico en pacientes
con elementos de evolución poco satisfactoria, HbsAg Antígeno de superficie del virus B.
deben ser motivo de preocupación. Anti-HBs Anticuerpos frente al antígeno de super-
4. Pruebas de síntesis hepática ficie del virus B.
• Proteínas totales y fraccionadas: Los nive- Anti-HBc Anticuerpos totales frente al core
les séricos de albúmina son normales en la del virus B.
hepatitis aguda típica, aunque descienden si Anti-HBc, IgM Anticuerpos del tipo IgM frente al core
la necrosis de los hepatocitos es de tal mag- del virus B.
nitud, que compromete la capacidad de sín- HBeAg Antígeno E del virus B.
tesis hepática, como sucede en las hepatitis Anti-HBe Anticuerpos frente al antígeno E del
graves y en algunas formas prolongadas. virus B.
• Coagulograma: Los factores I, II, V, VII, IX, Anti-VHB Genoma del virus B.
y X son indicadores de la capacidad de la sín-
HDAg Antígeno del virus Delta.
tesis hepática. Un déficit de los factores II,
IX y X prolonga el tiempo de protrombina, Anti-VHD Anticuerpos totales frente al virus Delta.
lo que establece la existencia de fallo en la Anti-VHD, IgM Anticuerpos de tipo IgM frente al virus
función de síntesis. Delta.
5. Otros estudios de laboratorio ARN-VHD Genoma del virus Delta.
• Hemograma: Por lo común, las cifras de he-
Anti-VHC Anticuerpos frente al virus C.
moglobina y hematíes son normales, con ten-
dencia al aumento en algunos casos. Anti-VHC-IgM Anticuerpos frente al virus C tipo IgM.
Ocasionalmente se presenta leucopenia al Anti-VHE Anticuerpos frente al virus E.
principio y luego linfomonocitosis; a veces
se observan linfocitos atípicos.
• Eritrosedimentación: Puede estar normal en En nuestro país, una vez establecido el
la fase de poliglobulia relativa, pero suele diagnósti- co clínico de hepatitis, es posible
moverse en ambos sentidos, por lo cual no establecer la de- terminación del antígeno de
debe tomarse como guía de la evolución de superficie de la hepatitis B y el del virus C por
la enfermedad. líneas de inmunoensayo de tercera generación;
estos medios se encuentran dis- ponibles en todas
las entidades de salud y consultas especializadas.
205
Estudios morfológicos Profilaxis activa
Laparoscopia: La realización de la laparoscopia y En los países con bajos niveles de endemicidad del
la biopsia hepática por aspiración a través de aguja, VHA, se autoriza la administración de vacunas
permiten visualizar las alteraciones macroscópicas inactivadas, que inducen la formación de anticuer-
y el daño histológico, respectivamente. No son pro- pos específicos a títulos protectores ante la posibili-
cederes de rutina en los casos de hepatitis viral agu- dad de viajes a zonas endémicas.
da, y se realizan sólo cuando resulta necesario Se dispone de dos tipos de vacunas para la pro-
distinguir la afección de otros procesos o cuando la tección contra el VHB: las de primera generación,
evolución no es favorable. constituidas por material antigénico HBs purifica-
do, y las de segunda generación, eleboradas por
Tratamiento recombinación genética mediante la inserción de
Tratamiento profiláctico levaduras del gen S del VHB. Este segundo tipo,
menos inmunogénico y de eficacia similar, se admi-
Es necesaria la educación sanitaria haciendo hinca-
nistra en el deltoides por vía IM en 3 dosis de 20
pié en los casos de trasmisión fecal-oral y en las
mcg, en el momento inicial, al mes y a los 6
medidas higiénicas que incluyan el control de los
meses; en el recién nacido la dosis es de 10 mcg y
alimentos y de los manipuladores, vigilancia de la
se inyecta en la cara anterolateral del muslo. Los
potabilización de las aguas y destrucción de resi-
sujetos inmunode- primidos, como los enfermos
duos, y en las que llevan implícita la trasmisión
con insuficiencia re- nal crónica en hemodiálisis,
sexual o parenteral, como la reducción de la pro-
alcohólicos e infectados por el VIH, requieren
miscuidad sexual y la utilización de preservativos,
dosis superiores y más fre- cuentes. No es
el extremar las precauciones para evitar inoculacio-
teratógena, por tanto puede adminis- trarse a las
nes accidentales, limitar el uso de transfusiones y
gestantes. En la actualidad, esta vacuna ha sido
seleccionar adecuadamente a los donantes, para lo
introducida en nuestro calendario de
que se dispone en todos los bancos de sangre del
vacunoterapia, lo que constituye otra medida de
país de medios para la detección del antígeno de su-
pro- tección contra dicho agente viral.
perficie de la hepatitis B y los anticuerpos de la C.
Prevención de la trasmisión vertical
Profilaxis pasiva
La infección de los hijos de gestantes HBsAg posi-
La administración de gammaglobulina convencional
tivo con replicación activa del VHB, en el
en dosis de 0,02 a 0,06 ml/kg de peso a los contac-
momento del parto es del 100 %, y entre 85 y 90
tos próximos a los pacientes con hepatitis A, apa-
% de estos niños infectados desarrollan un estado
rentemente no inmunizados, es una medida útil, tanto
de portador crónico del VHB. La inmunización
antes como después de la exposición; su efecto es
pasivo-activa de los recién nacidos de madres
limitado (1 a 6 meses) y no la contraindica el hecho
portadoras del VHB, previene la adquisición de
de otra infección viral o bacteriana.
la infección en más del 90 % de los niños; por
La gammaglobulina hiperinmune, elaborada a
lo tanto, es obligatorio evitar el riesgo de infección
partir de donantes inmunizados contra la hepatitis B,
de los hijos de madres HBsAg positivo mediante la
contiene títulos protectores. Está indicada en la pre-
administración de una dosis de 0,5 ml de
vención de la trasmisión vertical, la inoculación ac-
inmunoglobulina en el momento del nacimiento. La
cidental en personal sanitario o tras el contacto sexual
primera dosis de vacuna se apli- cará
ocasional con una persona infectada; una indicación
simultáneamente o al cabo de pocos días, y las
adicional son los pacientes sometidos a trasplantes
subsiguientes, al mes y a los 6 meses.
hepáticos por presentar hepatopatías crónicas por el
La obtención de una vacuna contra la hepatitis C
VHB. En todos estos casos la gammaglobulina con-
se encuentra aún en fase de estudio preliminar.
vencional, por su bajo nivel de anticuerpos específi-
Tratamiento curativo
cos, es ineficaz.
No ha sido desarrollada ninguna medida profi- No se dispone de ningún tratamiento etiológico de
láctica de este tipo contra los otros agentes virales. las hepatitis víricas en fase aguda. Las medidas te-
rapéuticas indicadas son sintomáticas y raramente
incluyen la hospitalización del paciente, la que se
206
planteará sólo en aquellos casos en los cuales se sos- no es posible iniciar el tratamiento de forma
peche una evolución desfavorable de la hepatitis; de precoz, como sería lo deseable.
igual modo, no es necesario un aislamiento riguroso El bajo riesgo de cronicidad en la hepatitis aguda
de todos los enfermos. B ha desestimado el uso del interferón en estos
El reposo estricto no es una medida fundamental; casos. Criterios de alta
éste será recomendado exclusivamente durante el
período de mayor astenia, y es el paciente quien de- Una vez desaparecidas las manifestaciones clínicas
cidirá sobre este aspecto, según su estado subjetivo. principales de la enfermedad (náuseas intensas,
No está demostrado que una dieta determinada, ano- rexia, vómitos, íctero y astenia marcada) y
como la basada en la restricción de grasas, mejore normali- zadas las cifras de transaminasas, se
el pronóstico de la enfermedad; sólo en las primeras procederá al alta clínica. El control mediante
fases del proceso se recomienda fraccionar las co- transaminasas se efectuará de forma semanal
midas, suprimir las grasas y aumentar la ingestión durante el primer mes, y luego mensualmente
de hidratos de carbono. Con respecto al alcohol, hasta los 6 meses, de modo que el médico
parece recomendable una abstinencia temporal. complete el seguimiento evolutivo de la afección.
Es preciso utilizar con precaución los agentes En pacientes con infección por el VHA, el alta
farmacológicos, pues un metabolismo anormal por clínica se corresponde con el alta epidemiológica,
parte del hígado enfermo es capaz de modificar su inclusive se plantea que el enfermo puede dejar de
acción; esto es especialmente importante en el caso ser infectante desde la aparición de las manifesta-
de los psicofármacos. Si el paciente presenta insom- ciones clínicas que marcan el período álgido de la
nio, una vez demostrado que no se trata de una for- enfermedad, mientras que en la hepatitis B dicha
ma inicial de encefalopatía hepática, es útil el alta está determinada por la desaparición del
oxacepán, cuyo metabolismo no se modifica en caso antígeno de superficie en el suero. En la hepatitis C
de enfermedad hepática. Los antieméticos (dimen- es la dis- minución o desaparición de los
hidrinato) están indicados, 1 ámpula o 1 tableta 3 anticuerpos contra el core y la NS3 lo que define el
veces al día, si aparecen vómitos. alta epidemiológi- ca, aunque la determinación del
En las formas colestásicas prolongadas, en las que ARN viral median- te la técnica de la reacción en
por lo general hay prurito, se administra colestira- cadena de la polimerasa
mina por vía oral en una dosis inicial de 12 g al día (PCR) es el indicador más fiel de recuperación de
en 3 tomas; es preferible que la del desayuno sea el la infección y de ausencia de trasmisibilidad.
doble de las demás, ya que por la mañana la vesícu-
la biliar se encuentra llena de bilis.
Los hepatoprotectores y polivitamínicos no han
demostrado influir en la duración o evolución del
HEPATITIS CRÓNICA
proceso. Hay que evitar los corticosteroides en las
hepatitis con capacidad potencial de progresión a la Concepto y clasificación
cronicidad, aunque pueden indicarse en casos de he- El tema de la hepatitis crónica ha constituido
patitis A que presenten colestasis intensa y pro- motivo de confusión y desacuerdo entre diferentes
longada.
autores. Hasta 1994, año en que la Asociación
Se ha utilizado el interferón en la hepatitis viral
Internacional para Estudios del Hígado (IASL), en
aguda con la intención de disminuir su duración y
su reunión bie- nal emitió un nuevo concepto de la
fundamentalmente la probabilidad de que evolucio-
entidad, se defi- nía como una enfermedad
ne a la cronicidad; sin embargo, estudios posterio-
inflamatoria difusa del hígado, que persistía al
res no han podido demostrar estos resultados. A pesar
de todo, existe un consenso creciente sobre la capa- menos durante 6 meses y que se ponía de
cidad del interferón para reducir el riesgo de la pro- manifiesto por pruebas de función hepática
gresión hacia la cronicidad en la hepatitis aguda C; anormales y alteraciones histológicas.
no obstante, la inmensa mayoría de los pacientes que Hoy conocemos que no es una simple enferme-
sufren esta forma cursan asintomáticos, por lo que dad, sino un síndrome clinicopatológico que
respon- de a varias causas y se caracteriza por
grados variables de inflamación y necrosis
hepatocelular.
207
No puede demarcarse en el tiempo, pues lesiones Por otro lado, son características de la hepatitis
agudas se extenden más allá de los 6 meses y no crónica C la presencia de folículos linfoides, cam-
siempre se acompaña de anormalidad humoral; que- bios displásicos en el epitelio biliar y celularidad
dan, además, obsoletas todas las clasificaciones an- sinusoidal abundante.
teriores: la De Grote, en 1968, que las ordenaba en Existen sistemas de valoración de la actividad de
hepatitis crónica persistente y activa; la de Shoffer, la enfermedad; el utilizado con anterioridad, que
en 1971, que agregaba a la anterior la forma lo- di- vidía la hepatitis crónica en persistente y activa,
bulillar, por el predominio de lesiones en el parén- esen- cialmente estimaba la actividad y no el
quima, y otras. estadio.
A partir de este momento quedaba estructurado El índice de Knodell permite medir el grado de
el concepto y su clasificación, siendo necesario siem- actividad valorando la inflamación portal, la necro-
pre que se aborde el tema, enfocarlo desde tres pun- sis periportal, la necrosis lobubillar y la fibrosis de
tos de vista. forma precisa, al mismo tiempo que incluye una
1. Etiológico. Se han definido tres agentes virales valoración de la actividad histológica estimando,
relacionados con la entidad: los virus de la hepatitis ade- más, la necrosis confluente y la inflamación
B, C y el agente Delta, aunque recientes estudios intracinar; también permite, de forma separada,
sugieren que los nuevos virus G y GBC (probable- determinar el estadio de la enfermedad, y tiene en
mente el mismo agente) tengan algún papel en la cuenta los cam- bios arquitecturales, la fibrosis y
patogenia de la hepatitis crónica viral, además de la la presencia de cirrosis. Con una puntuación para
lesión autoinmune que reemplaza el término lupoide, cada uno de los indicadores evaluados, hace más
la lesión por drogas (metil-dopa, isoniazida, nitro- flexible la clasifi- cación anterior y tolera una
furantoína, papaverina y oxifenisatina), así como la mejor acomodación a los cambios en el campo de la
criptogénica o criptogenética para aquellos casos en hepatitis crónica.
que no puede definirse una causa.
No deben considerarse variantes de hepatitis cró- ÍNDICE DE KNODELL
nica la cirrosis biliar primaria, la colangitis esclero- ÍNDICE DE ACTIVIDAD HISTOLÓGICA
sante primaria, la enfermedad de Wilson, el déficit PUNTUACIÓN DE KNODELL-ISHAK
de  -1 antitripsina y las lesiones producidas por
alcohol. Aspecto histológico Gravedad Puntuación
2. Grado de actividad. Depende de la magnitud 1. Necrosis periportal, • Ninguna 0
de la necrosis y de la inflamación, evaluadas simul- incluso necrosis frag- • NF discreta 1
táneamente por el índice de Knodell, que permite mentada (NF) y pun- • NF moderada 3
expresar cuatro grados: mínimo, leve, moderado e tos de necrosis (PN) • NF acentuada 4
• NF+PN moderada 5
intenso.
• NF+PN acentuada 6
3. Definición del estadio. En dependencia de la • Necrosis multilo- 10
presencia o no de fibrosis, así como su intensidad. bular
Anatomía patológica 2. Necrosis intralobular • Ninguna 0
En el presente acápite se abordará lo referido a la • Discreta 1
• Moderada 3
hepatitis crónica de causa viral; la hepatitis autoin- • Acentuada 4
mune será tratada aparte.
3. Inflamación portal • Ninguna 0
El sustrato morfológico de la hepatitis crónica es
• Discreta 1
una reacción inflamatoria portal asociada a grados • Moderada 3
variables de daño hepatocelular. Algunas lesiones • Acentuada 4
son altamente evocadoras del agente etiológico; así, 4. Fibrosis • Ninguna 0
una tercera parte de los pacientes con hepatitis cró- • Expansión portal 1
nica B presentan hepatocitos con citoplasma esme- fibrosa
rilado, y utilizando técnicas inmunológicas es posible • Fibrosis en puente 3
identificar HbcAg en el núcleo y a veces en el cito- • Cirrosis 4
plasma de enfermos en estadio de replicación. Puntuación máxima 22
208
CORRELACIÓN ENTRE LA NOMENCLATURA Exámenes complementarios
ANTIGUA DE HEPATITIS CRÓNICA
Y LA CONTEMPORÁNEA Laboratorio clínico
Desde el punto de vista humoral, la elevación de
Clasificación Clasificación contemporánea las transaminasas es la alteración más frecuente,
antigua cuyo valor fluctúa y no sobrepasa habitualmente
diez ve- ces los normales. El estimado de las
Nivel (de actividad) Estadio (fibrosis)
transaminasas séricas no es representativo de la
gravedad del pro- ceso subyacente, ni el tiempo es
Hepatitis crónica Mínima o discreta Ninguna o discreta un elemento para establecer el pronóstico de la
persistente enfermedad; cifras ele- vadas pueden asociarse a
Hepatitis crónica Discreta o moderada Discreta una seroconversión y, por tanto, cese de replicación
lobulillar viral en un caso con hepa- titis B crónica; sin
Hepatitis crónica Discreta, moderada Discreta, mode- embargo, es común que en pa- cientes cirróticos,
activa o grave rada o grave sobre todo en los que la causa es el VHB, estas
cifras estén poco elevadas o sean nor- males. En el
caso de la hepatitis C, un comporta- miento
Cuadro clínico
fluctuante de sus cifras es uno de los rasgos que
La mayoría de los enfermos con hepatitis crónica caracteriza clínicamente la entidad.
están asintomáticos y la enfermedad se diagnostica El cociente TGO/TGP es con frecuencia inferior
de forma casual en el momento en que, por razones a 1 y se invierte cuando los enfermos desarrollan
diversas, se comprueba un incremento de las cifras de cirrosis.
transaminasas, o se decide estudiar el hallazgo de La elevación de las cifras de gamma-glutamil-
un antígeno de superficie o de un anticuerpo de he- transpeptidasa y la cifra de gammaglobulinas, es
patitis C positivo en un donante u otro grupo de ries- tam- bién común, esta última especialmente en el
go. Algunos pacientes aquejan astenia, molestias curso de lesiones más agresivas.
inespecíficas en la zona del hipocondrio derecho,
fatiga ante esfuerzos leves o necesidad de dormir
Marcadores virales
más horas; otros, menos común, refieren náuseas, El estudio de los marcadores virales es
dolores musculares y articulares, mientras que sín- fundamental para establecer el diagnóstico
tomas más típicos de enfermedad hepática como etiológico.
íctero, prurito, anorexia y pérdida de peso son infre-
Una vez detectada la positividad del antígeno de
cuentes.
superficie, en el estudio de un paciente con
La exploración física muestra en ocasiones la pre-
hepatitis B crónica hay que distinguir dos fases de
sencia de hepatomegalia; si se detecta esplenome-
la enfer- medad: una de elevada replicación viral
galia o algún estigma periférico de insuficiencia
y otra de baja o ausente replicación viral; la
hepática crónica, es indicativo de evolución hacia la
transición de una a otra fase se denomina
cirrosis.
seroconversión y está ca- racterizada por una
Se ha observado asociación de la hepatitis cróni-
serie de eventos clínicos, bioquímicos,
ca a otras enfermedades. La inflamación crónica por
inmunológicos y morfológicos.
el VHC se ha implicado en la etiología de la hepati-
El período replicativo se expresa serológicamente
tis crónica autoinmune tipo 2; se ha responsabilizado
por la presencia del HBeAg, el ADN del VHB y la
de igual modo con la patogenia de la crioglobuline-
demostración inmunohistoquímica del HBeAg en el
mia mixta esencial; han sido detectados complejos
núcleo y el citoplasma de los hepatocitos, todo esto
inmunes que contienen VHC en glomerulonefritis
acompañado o no de transaminasas elevadas o acti-
membranoproliferativas, y hay evidencia de la rela-
vidad necroinflamatoria. La fase no replicativa se
ción de esta infección con la púrpura trombocitopé-
caracteriza por ausencia serológica de replicación
nica idiopática, sialoadenitis linfocíticas, así como
viral y la presencia de anti HBc, acompañado de
enfermedades tiroideas de origen autoinmune.
transaminasas normales y escasa actividad histoló-
gica. Ambos estados no se encuentran totalmente
estáticos y suelen ocurrir transiciones entre ellos.
209
En pacientes con infección crónica por el VHB, su realización simultánea con una laparoscopia,
en ocasiones ocurre que el fragmento de la cadena per- mite tener el criterio macroscópico del daño
de ADN viral que codifica la producción de HbsAg hepáti- co y dirige la biopsia al sitio deseado. En
se integre al genoma del hepatocito de forma tal, el tejido obtenido, además del estudio
que aunque cese la actividad replicativa del virus, histopatológico, se detectan a veces los antígenos
continúe produciéndose antígeno de superficie y, por de los virus B y D mediante técnicas
tanto, detectándose en el suero en ausencia de los inmunohistoquímicas.
marcadores de replicación; esto tiene importantes im- Siguiendo las recomendaciones del grupo de ex-
plicaciones, pues puede estar asociado a la capaci- pertos que propuso la clasificación de la hepatitis
dad oncogénica del virus y probablemente a la crónica, el diagnóstico final debe estar basado en
aparición de brotes de replicación, por un mecanis- tres hallazgos: la etiología, el grado y el estadio de
mo de retrotranscripción parecido al de los retrovirus. la enfermedad; por ejemplo:
El marcador sérico de infección delta crónica es el
anticuerpo antidelta anti VHD, ya sea total o del • Hepatitis B crónica con actividad moderada y
tipo IgM. El ARN del VHD en el suero se detecta de fibrosis severa.
forma paralela al antígeno delta. Su presencia • Hepatitis C crónica con actividad severa y
serológica indica una alta infectividad y la persis- fibrosis moderada.
tencia por más de 4 semanas hace pensar en sobre-
infección.
Hay que establecer el diagnóstico diferencial con
La determinación del anti VHC constituye la prue-
enfermedades metabolicogenéticas, como la enfer-
ba de elección para establecer si el virus C es el cau-
sante de una hepatitis crónica. La detección del ARN medad de Wilson y la hemocromatosis, el alcoho-
viral mediante la reacción en cadena de la polimera- lismo crónico y la esteatosis hepática, las hepatitis
sa, es el método diagnóstico que permite determinar reactivas a enfermedades de la vesícula y vías
la presencia del virus en el suero, mientras que la biliares, así como el parasitismo intestinal. Deben
hibridación in situ puede descubrir el ARN en el te- diferenciarse entre ellas las de origen viral con las
jido hepático. La determinación del ARN del VHC autoinmunes por drogas y criptogénica. Un brote
se utiliza con fines diagnósticos y para monitorear de actividad de una hepatitis crónica suele elevar
el tratamiento.
las transaminasas y confundirse con una hepatitis
Estudios morfológicos aguda. Evolución y pronóstico
El estudio histológico mediante biopsia hepática di- La evolución varía en cada una de las formas
rigida por laparoscopia o ultrasonido, o percutánea a etioló- gicas; no obstante, el curso hacia la
ciegas, es imprescindible para el diagnóstico posi- cirrosis y el hepatocarcinoma es una posibilidad
tivo. real, tanto en la causada por el virus B como por el
La ecografía no aporta datos de interés, a excep- C.
ción del enfermo que ha desarrollado una cirrosis Una vez que un enfermo con infección por virus
hepática, en el cual se pondrá de manifiesto una al- B ha llegado a la cronicidad, lo que ocurre hasta en el
teración de la ecoestructura hepática, un hígado de 5 % de adultos sin trastornos de la inmunidad y en
contornos nodulares o signos ecográficos de hiper- una proporción mayor en inmunodeprimidos e
tensión portal. infeccio- nes perinatales, la posibilidad de
seroconversión se observa en un 10 o 20 % de los
Diagnóstico casos de forma anual; ésta es más frecuente en los
La pobre expresividad clínica, cifras de transamina- que adquieren la infec- ción por trasmisión
sas elevadas de forma prolongada, el hallazgo de un horizontal, luego de lo cual un 1 a 2 % logran
marcador viral positivo (HbsAg o anti VHC), son eliminar el antígeno de superficie tras años de baja
hechos que hacen comenzar el estudio de un sujeto, o nula replicación.
que finalmente se concluye con el diagnóstico de La posibilidad de que la hepatitis crónica por el
hepatitis crónica. La biopsia hepática es esencial y virus B progrese al estado de cirrosis, es conocida
desde hace muchos años y se considera en un 20 %
de enfermos tras 5 años de seguimiento, riesgo que
de- pende del tiempo de replicación viral, edad y
grado
210
de lesión hepática, entre otros factores; se estima no debe tener una prohibición absoluta. Respecto al
una mortalidad de 15 % después de 5 años de inicia- uso de fármacos, su prescripción carece de funda-
da la cirrosis, o el desarrollo de un hepatocarcinoma mento, ya que los efectos secundarios y los riesgos
en un 10 a 15 %, en ese mismo intervalo de tiempo. de su administración no difieren de los que apare-
La infección crónica por el VHD tiene casi siem- cen en personas no afectadas de hepatitis.
pre su origen en la sobreinfección de un portador No debe contraindicarse la gestación, si bien hay
con lesiones hepáticas del VHB, lo que determina que informar los riesgos de contagio que el recién
espaciamiento histológico y progresión a la cirrosis nacido pueda tener y proceder, en el caso de la he-
en un período de tiempo relativamente corto en al- patitis B, a aplicar las medidas profilácticas pasivas
rededor del 50 % de los casos. y activas de que se dispone.
Se considera que más del 50 % de los afectados
por el VHC evolucionan a la cronicidad y de ellos, Tratamiento farmacológico
entre el 35 y 50 % presentan actividad histológica El empleo que durante muchos años se ha hecho de
moderada a intensa, y el 10 a 20 % cirrosis hepática fármacos denominados hepatoprotectores, como el
al momento del diagnóstico, independientemente del
clanidol, la silimarina u otros, no se ha sustentado
mecanismo de adquisición. De la misma manera que
sobre estudios controlados que demuestren su efi-
ocurre con el virus de la hepatitis B, existen hoy en
cacia. Los corticosteroides, muy utilizados en la
día pruebas suficientes de una asociación fuerte en-
pasada década de los setenta como tratamiento de
tre el virus de la hepatitis C y el desarrollo de
hepatocarcinoma, que no está relacionada con la in- la hepatitis crónica B, han demostrado ser
tegración del genoma, puesto que el virus de la he- claramente perjudiciales.
patitis C es un ARN; pero se especula esto en Existen en la actualidad numerosas razones para
relación con la necrosis hepatocelular severa enfocar el tratamiento de la hepatitis crónica desde
continuada y la capacidad oncogénica de un punto de vista etiológico, sobre la evidencia de
determinados genotipos virales, como el 1b, que la evolución depende del agente causal, el esta-
asociado con mayor frecuencia al desarrollo de do replicativo, el grado de actividad y el estadio de
dicha neoplasia. la enfermedad.
Debe señalarse que en la infección por el VHC El tratamiento de la lesión hepática crónica por
no siempre se observa una progresión escalonada virus B está basado en los mecanismos etiopatogé-
desde la hepatitis crónica hacia la cirrosis y de esta nicos que la producen, sobre la demostración del
última al hepatocarcinoma; una proporción bastante efecto no citopático del VHB y, por tanto, de su ori-
significativa evoluciona de forma directa desde la gen debido a una reacción inmunoespecífica del
lesión histológica crónica al cáncer del hígado, sin huésped mediada por linfocitos T citotóxicos acti-
desarrollar una cirrosis intermedia, especialmente los vados. Diferentes tratamientos han sido utilizados,
infectados por el serotipo 1b. pero el fármaco con mayor eficacia terapéutica ha
sido el interferón , basado fundamentalmente en
Tratamiento su mecanismo inmunomodulador. Las dosis y dura-
El diagnóstico de hepatitis crónica comporta siem- ción del tratamiento suelen establecerse en 5 o 10
pre para el paciente un grado importante de preocu- millones de unidades 3 veces por semana durante 6
pación, que el médico debe situar en su justa medida meses y la respuesta al tratamiento es evaluada al
mediante explicaciones claras y normas de conduc- final de este tiempo por la normalización de las
ta sencillas de utilidad demostrada. Existen muchas tran- saminasas, la desaparición de
creencias de origen popular desmentidas. Al igual marcadores de replicación y la regresión
que en el tratamiento de las hepatitis agudas, no hay histológica parcial que se completa a los 2 años
evidencias científicamente comprobadas de que el hasta en el 80 % de los casos. Otros agentes
reposo absoluto o las dietas alimentarias de cual- continúan siendo ensayados, entre ellos
quier tipo modifiquen el curso de la enfermedad; por combinaciones de interferón y esteroides, in-
lo tanto, aunque es lógico individualizar cada caso, terferón y AINE, interferón gamma, timosina, leva-
no se deben imponer restricciones en la alimenta- misol, vidarabina, aciclovir, suramina, zidovudine,
ción o en la actividad física. El consumo de alcohol didanosine, ribavirina y fialuridina. Una gran pro-
mesa se cifra en los nuevos ensayos análogos de
211
nucleótidos, fanciclovir, lamivudina, lubucavir y para ello existen indicadores que aparecen encua-
adefovir dipivoxil, que pudieran ser un arma solos o drados parecen tener valor como elementos favore-
combinados con el interferón, en los casos resisten- cedores de una futura buena respuesta al
tes. El más efectivo de estos agentes es lamivudina tratamiento.
o 3TC, un inhibidor de la transcriptasa inversa del
virus, que se administra en dosis única de 100 mg INDICADORES QUE PRESUPONEN UNA BUENA
para adultos, con un perfil menor de reacciones ad- RESPUESTA AL INTERFERÓN
versas que el interferón, pero no ha podido precisarse Hepatitis B crónica Hepatitis C crónica
en qué momento puede finalizarse el tratamiento de Corta duración de la Corta duración de la enferme-
forma segura, pues se ha observado recurrencia en enfermedad. dad.
la actividad del virus una vez descontinuada su ad- Altos niveles séricos de Adulto joven.
ministración; incluso, un 10 o 15 % de aparición de transaminasas.
formas virales mutantes después de 9 meses de tra-
Lesión hepática activa sin Ausencia de cirrosis o
tamiento. fibrosis. mínimos elementos de
El único fármaco que hasta el momento ha de- fibrosis.
mostrado alguna eficacia terapéutica en la hepatitis D Bajos niveles de ADN viral. Bajos niveles de ARN viral.
crónica es el interferón , administrado en dosis de 9 Variante viral con antígeno Genotipos 2 o 3 (ausencia del
a 10 millones de unidades, 3 veces por semana, du- positivo. genotipo 1b).
rante 1 año. Se ha logrado una respuesta virológica, Ausencia de inmuno- Bajos niveles de hierro
bioquímica e histológica en el 30 % de los pacien- supresión. hepático.
tes; sin embargo, el principal inconveniente lo cons-
tituyen la recidiva en la actividad enzimática y la En la actualidad se considera que cualquier en-
replicación viral en la mayoría de los casos, al in- fermedad hepática grave, progresiva y sin posibili-
terrumpirse el tratamiento.
dad de tratamiento alternativo o mala respuesta a
En la hepatitis C crónica es también el interferón
los esquemas anteriores, constituye indicación de
el medicamento de elección, pero a diferencia de la
trasplante hepático; de acuerdo con el European
respuesta observada en las hepatitis B y Delta, ca-
Liver Transplant Registry, la posibilidad de
racterizadas por el efecto relativamente tardío y pre-
cedido de elevación habitual de las transaminasas, supervivencia tras éste es de 72 % a los 12 meses, de
los casos respondedores con hepatitis C crónica pre- 64,6 % a los
sentan mejoría enzimática antes de las 8 semanas, 3 años y de 61,9 % a los 5 años del procedimiento,
relacionada con la actividad antiviral del fármaco. lo que hace razonable su indicación si la
Se recomienda emplearlo durante 12 meses en dosis probabilidad de supervivencia con el tratamiento
de 3 millones de unidades 3 veces por semana; se convencional es inferior a estas cifras.
logra así una respuesta que oscila entre 41 y 70 %, Es importante reconocer que la tasa de
pero con recaídas que van desde el 50 al 70 % de los reinfección por el virus B, Delta o C es elevada,
casos, asociadas a una reaparición del ARN viral en por lo que el reto actual es la reducción de dichas
el suero. En estos enfermos, así como en los no tasas al mismo tiempo que se lucha por una
respondedores, son recomendadas las asociaciones terapéutica antirrechazo más efectiva.
de fármacos; la ribavirina ha mostrado una intere-
sante capacidad antiviral en algunos estudios donde
se ha empleado combinada, no así lo obtenido de las
asociaciones con el ácido ursodesoxicólico y la N-
HEPATITIS
acetilcisteína. AUTOINMUNE
A pesar de ser la droga de elección, el tratamien-
to con interferón no es eficaz en un número de pa-
cientes con afección por virus B y tampoco en una Concepto
cantidad aún mayor de casos con hepatitis C cróni- La hepatitis autoinmune es una inflamación crónica
ca. Determinar qué características diferencian a es- del hígado caracterizada por la presencia de hiper-
tos enfermos de los respondedores es importante y gammaglobulinemia, diversos autoanticuerpos circu-
lantes y la existencia en el examen histológico de al
212
menos una hepatitis periportal (piecemeal necrosis), la coexistencia de enfermedades autoinmunes ex-
siempre que se excluya de forma epidemiológica o trahepáticas (34 %); afecta por lo general a niñas
serológica la evidencia de infección viral, exposición entre 2 y 14 años, aunque un 20 % de las hepatitis
prolongada a drogas hepatotóxicas y alteraciones autoinmunes del adulto puede ser de esta forma. El
hereditarias, como enfermedad de Wilson, hemocro- inicio con frecuencia es agudo, y a veces presenta
matosis y deficiencia de -1 antitripsina. Otras ca- un curso fulminante o una rápida progresión a la ci-
racterísticas definitorias son la buena respuesta al rrosis.
tratamiento inmunosupresor y la incidencia La presencia concomitante de infección por virus
mayoritariamente femenina. C en pacientes mayoritariamente varones, adultos,
Las primeras descripciones de esta entidad utili- con títulos bajos de Anti LKM1 y enfermedad de
zaron el término de hepatitis lupoide, por la existen- curso más lento hacia la cirrosis, pero que además
cia de una serie de rasgos comunes a enfermedades no res- ponden al tratamiento inmunosupresor y sí
consideradas de origen autoinmune. En la actuali- al inter- ferón alfa, fue descrita como variante H-B;
dad, la idea de una autorreactividad inmune aberrante hoy no se aconseja esta división, pues se ha
constituye la base etiopatogénica de esta lesión he- demostrado que la lesión de autoinmunidad es un
pática plenamente aceptada, pero sin embargo con- epifenómeno en el curso de infección crónica por
tinúan existiendo muchas dificultades para alcanzar virus C.
una definición y una nomenclatura estandarizada para Hepatitis autoinmune tipo III. Se caracteriza por
todas ellas. la presencia de anticuerpos contra SLA y afecta en
un 90 % a mujeres jóvenes que típicamente carecen
Nomenclatura de Anti LKM 1, pero exhiben en su mayoría
ANA Anticuerpos antinucleares. Anti seropositividad para anticuerpos antimúsculo liso
SMA Anticuerpos antimúsculo liso.
(SMA) o para anticuerpos antimitocondriales
(AMA).
Anti LKM1 Anticuerpo contra microsoma renal/hepático Hepatitis autoinmune seronegativa. Este término
tipo 1. se aplica a pacientes con características similares
Anti SLA Anticuerpos contra antígeno soluble del hí- en edad, sexo, clínica e histología, afectados de
gado. hepati- tis autoinmune tipo I, con igual respuesta
ASGPR Receptor de la asialoglucoproteína. al trata- miento con corticosteroides, pero en los
cuales no puede demostrarse seropositividad para
autoanticuer- pos conocidos.
Clasificación
La clasificación de las hepatitis autoinmunes de Etiopatogenia
acuerdo con la especificidad de los anticuerpos circu-
La etiología autoinmune implica una discapacidad,
lantes, es en la práctica la más utilizada, dado su
probablemente determinada de forma genética,
interés clínico, pronóstico y epidemiológico.
para mantener una correcta tolerancia inmunológica
Hepatitis autoinmune tipo I. Es el tipo más fre- frente a los autoantígenos. Se desconocen en gran
cuente, se caracteriza por la presencia de autoanti- medida los mecanismos patogénicos responsables,
cuerpos ANA o SMA o ambos; este último exhibe a pesar de que existen múltiples hipótesis. Entre
especificidad contra la actina. La mayoría de los éstas, dos son fundamentales. La primera se basa
pacientes son mujeres (8:1), típicamente menores en un meca- nismo de citotoxicidad celular mediado
de 40 años y un 17 % presentan de forma concomi- por anticuer- pos y postula la existencia de un
tante otras enfermedades autoinmunes, como defecto en la función de los linfocitos T supresores,
tiroiditis, enfermedad de Graves-Basedow, artritis que resultaría de una producción descontrolada de
reumatoidea, anemia hemolítica autoinmune y ane- anticuerpos contra los hepatocitos por parte de los
mia perniciosa. linfocitos B. La segun- da hipótesis presume la
Hepatitis autoinmune tipo II. La distingue la pre- existencia de un autoantígeno cuyos principales
sencia de anticuerpos Anti LKM1; los ANA y SMA candidatos son ASGPR y la enzi- ma microsómica
están ausentes. Típicamente cursa con niveles de P-450II D6, que condiciona la ac- tivación de
gammaglobulinas no tan elevados, y es más común células citolíticas. Las razones para esta
213
autorreactividad no están claras. Se sabe que duran- el sistema endocrino se han descrito manifestacio-
te la ontogenia no todos los linfocitos autorreactivos nes cushingoides.
son eliminados, y es posible que en algunos indivi-
duos genéticamente predispuestos (se ha encontra- Exámenes complementarios
do una asociación con los antígenos HLA-DR3, Transaminasas. Son las enzimas más
HLA-DR4 y HLA-B8), ciertos factores ambienta- frecuentemente aumentadas, aunque a veces
les pudieran dar lugar a una activación de ellos.
disminuyen de forma espontánea en el transcurso
Cuadro clínico
de la enfermedad.
La sintomatología de la hepatitis autoinmune, en Bilirrubina sérica. Por lo general está aumenta-
extremo variable, depende del grado de afectación da por encima de 20 mol/L.
de la función hepática; el comienzo es a menudo Proteínas totales y fraccionadas. Ponen en evi-
insidioso, la mayoría de las veces con fatiga, males- dencia niveles muy altos de gammaglobulina
tar general y anorexia (síntomas predominantes tam-
sérica, por lo general más del doble de lo normal.
bién en el resto de las hepatitis crónicas). En una
Hemograma. Suelen hallarse leucopenia y trom-
cuarta parte de los enfermos el inicio se asemeja al
bocitopenia, aun sin hipertensión portal; es frecuente
de un ataque de hepatitis viral aguda; en muchos
una anemia normocítica normocrómica.
casos la enfermedad se mantiene asintomática du-
rante meses o hasta años antes de que el diagnóstico Coagulograma. El tiempo de protrombina se
se realice. pro- longa en dependencia de la severidad del
En las mujeres, la amenorrea es usual y la reapa- daño he- pático.
rición de la menstruación constituye un buen signo. Anticuerpos específicos. La seropositividad para
La epistaxis, gingivorragia y equimosis consecuti- anticuerpos ANA, SMA o anticuerpos contra
vas a traumatismos mínimos son otras manifesta- LKM1 a títulos superiores o iguales a 1:80, son
ciones comunes. exámenes definitorios para el diagnóstico. La
El examen físico puede evidenciar íctero, cuya presencia de an- ticuerpos no convencionales,
persistencia alerta al médico sobre la posibilidad de como los anticuerpos contra SLA o ASGPR,
una enfermedad hepática crónica; el íctero franco es permiten plantear la proba- bilidad diagnóstica.
a menudo episódico y raramente adopta el tipo Debe realizarse determinación de marcadores
colestásico; es posible encontrar arañas vasculares víricos para virus A, B y C (IgG anti VHA, IgM
con tendencia a ser pequeñas y desaparecer con los anti VHA, HBsAg y anti VHC) para excluir dichos
cambios de actividad de la afección; en los muslos y agen- tes etiológicos.
región lateral del abdomen se reportan estrías cutá- Laparoscopia y biopsia hepática. Resultan prue-
neas. Al examinar el abdomen se suele palpar una bas de gran valor, aunque esta última con alguna
hepatomegalia de alrededor de 4 cm, con predomi- frecuencia es imposible de realizar a causa de las
nio del lóbulo izquierdo, pero rara vez nodular; casi alte- raciones de la coagulación presentes en estos
siempre existe esplenomegalia. El edema, la ascitis casos. Macroscópicamente el hígado no difiere
y la encefalopatía hepática son tardías. Un síndro- en su aspecto del de otros procesos crónicos; está
me febril crónico es otra forma de manifestarse la aumen- tado de tamaño y el borde es grueso, a
enfermedad. veces fibroso y festoneado. Desde el punto de vista
La coexistencia de otras afecciones autoinmunes es
histológico, el infiltrado inflamatorio comprende
frecuente, entre las que se encuentran la poliartritis
linfocitos, célu- las plasmáticas y gran variedad de
aguda recurrente no deformante de articulaciones
células presenta- doras de antígeno, y se
mayores; una vasculitis alérgica, hemorragias
encuentran tanto en los
purpúricas y eritema en alas de mariposa.
La biopsia renal ha demostrado glomerulonefri- espacios porta como en los ácinos.
tis con depósitos de complejos inmunes a este nivel, Se denomina necrosis piecemeal a la muerte de
aun en ausencia de proteinuria; en los pulmones se hepatocitos en la interfase entre el parénquima y el
han encontrado infiltraciones transitorias múltiples, tejido conectivo inflamado de un espacio porta o de
anastomosis arteriovenosas y alveolitis fibrótica. En un tracto fibroso, y junto con el infiltrado a predo-
minio linfoplasmocitario, constituye la característi-
ca definitiva de esta afección. Cuando la necrosis
se
214
hace confluente y une entre sí estructuras vascula- Tratamiento
res, se habla de bridging (puentes) y es un signo de Los últimos estudios parecen demostrar que el tra-
progresión hacia la cirrosis. La presencia de una in-
tamiento inmunosupresor es el único capaz de lo-
tensa actividad inflamatoria, un importante predomi-
grar una respuesta sostenida, pues puede no sólo
nio de células plasmáticas o la formación de rosetas
hepatocitarias, se consideran rasgos distintivos de las detener la progresión de la enfermedad, sino tam-
hepatitis autoinmunes, aunque ninguno de ellos es bién revertir los cambios fibrosos ya instaurados,
patognomónico. aunque nunca una vez alcanzado el estado de cirrosis.
La prednisona o preferentemente la prednisolona se
utiliza en la dosis inicial de 30 mg/día; luego se
Diagnóstico
disminuye de forma progresiva hasta alcanzar la
Los criterios diagnósticos aceptados por la mayoría dosis de mantenimiento de 10 mg/día. El nivel de
en la actualidad, proceden de la reunión de consen- transaminasas es el mejor marcador de que se está
so celebrada en Brighton, Inglaterra, en junio de 1992. administrando la dosis correcta, y se aconseja man-
Para el diagnóstico seguro, además de los sínto- tenerlas en valores comprendidos entre el normal y
mas, signos y anomalías humorales e histológicas,
el doble de esta cifra.
son indispensables los siguientes elementos:
Si no existe contraindicación (pacientes citopéni-
• Ausencia de marcadores de replicación vírica cos, antecedentes de cáncer o mujeres con proyecto
activa; ausencia de exposición a sangre o deri- de embarazo), la azatioprina permite reducir la do-
vados; ausencia de alcohol, fármacos u otras sis y los efectos secundarios de la prednisona; se
posibles causas. dan 50 mg/día, pero no debe emplearse como único
• Seropositividad para anticuerpos ANA, SMA o tratamiento para inducir la remisión.
anticuerpos contra LKM1 a títulos superiores Dado que el tratamiento inmunosupresor no está
o iguales a 1:80. dirigido específicamente contra la causa de la
• Niveles de gammaglobulina 1,5 veces por enci- enfer- medad, lo más frecuente es que deba ser
ma del límite alto de la normalidad. mantenido de por vida, pues las recaídas son
usuales al aban- donarlo, incluso en aquellos casos
Cabe plantear un diagnóstico de probabilidad en en los que se han mantenido controlados los niveles
las situaciones siguientes: de transaminasas durante años.
Es preciso tener presente que el 30 % de los pa-
• Si se cumplen niveles de gammaglobulina ele-
cientes no alcanzan remisión total y que un 70 %
vados.
tienen recidivas poco después de suprimir el trata-
• Autoanticuerpos a títulos menores de 1:80 o pre-
miento o bien deben abandonar los fármacos por
sencia de anticuerpos no convencionales, como
los anticuerpos contra SLA o contra ASGPR. sus efectos secundarios; se produce en ellos una
• Presencia de exposición a alcohol o fármacos progre- sión de la enfermedad, que en el 40 %
hepatotóxicos, pero sin que esta pueda asociar- conduce en 10 años a la cirrosis. La ciclosporina A,
se a la perpetuación de la inflamación. el FK 506, los extractos tímicos, la budesonida, el
• La ausencia de autoanticuerpos en la fase ini- brequinar o la rapamicina son en la actualidad
cial no debe excluir el diagnóstico. alternativas far- macológicas prometedoras.
En aquellos pacientes cuya enfermedad se pre-
senta con un curso fulminante, o bien ya en estadio
de cirrosis, el trasplante ortotópico de hígado ha
demostrado ser una alternativa terapéutica muy
exitosa, pues el riesgo de recidiva en el órgano in-
jertado es muy bajo.
215
22
CIRROSIS HEPÁTICA
Concepto tica, se considera que en su aparición deben desem-
peñar un papel importante, además, factores nutri-
La cirrosis es una enfermedad del hígado crónica,
cionales, inmunológicos y genéticos. Se plantea que
progresiva, difusa, irreversible y de causa variada,
la hepatitis alcohólica sea la precursora de la cirro-
que se caracteriza por la presencia de fibrosis en el
sis o que en realidad haya una estimulación directa
parénquima hepático y nódulos de regeneración, que
de la fibrogénesis por el alcohol.
llevan a una alteración de la arquitectura vascular.
Virus de la hepatitis. El 5 o 10 % de las cirrosis
Las manifestaciones clínicas son el resultado de las
se debe al virus de la hepatitis B. Incluso se ha pro-
alteraciones histopatológicas; así, a la insuficiencia ducido ésta en los portadores crónicos de virus B,
hepática se deben la ictericia, el edema y la en los países en que esta infección es endémica. Un
coagulopatía, y a la fibrosis y la alteración vascular, alto porcentaje de pacientes catalogados como
la hipertensión portal, que provoca las várices eso- portado- res de una cirrosis criptogénica, tienen
fágicas y la esplenomegalia, así como la ascitis. anticuerpos contra el virus de la hepatitis C.
Epidemiología También se han en- contrado estos anticuerpos
(anti-VHC) en enfermos portadores de cirrosis
La cirrosis hepática es una afección frecuente que alcohólica o HBsAg-positiva, lo que hace plantear
se presenta en todas las latitudes y grupos humanos,
que este virus tenga participa- ción en la patogenia
y se observa más a menudo pasada la edad media
de la cirrosis de estos casos. Cirrosis biliar
de la vida. Predomina en los hombres, excepto en
primaria. Inicialmente los conduc- tillos biliares
los grupos más jóvenes, pues aunque la cirrosis están destruidos por una reacción in- munológica;
ocurre poco antes de los 20 años, cuando lo hace es después hay inflamación, necrosis
más común en la mujer.
celular con fibrosis y colagenización.
En los Estados Unidos tiene una frecuencia de 360 Cirrosis biliar secundaria. Se ve en el curso de
por 100 000 habitantes. Produce 30 000 muertes al
afecciones capaces de bloquear el flujo biliar duran-
año, y es mayor la tasa de mortalidad en el hombre.
te un largo tiempo (como mínimo 3 meses).
Se encuentra entre las 10 causas principales de muer-
Obstáculo al drenaje venoso del hígado. En la
te en el mundo occidental. En el decenio de 1980 se
eta- pa final de cualquier congestión venosa crónica
observó una disminución de la mortalidad por esta
dolencia en un 25 %, lo que se ha tratado de expli- del hígado, se puede producir una cirrosis hepática
car por un menor consumo de bebidas alcohólicas, (in- suficiencia cardíaca congestiva, pericarditis
la vacunación contra la hepatitis B y el trasplante constric- tiva, síndrome de Budd-Chiari).
hepático. Fármacos. No es frecuente que los fármacos pro-
duzcan cirrosis hepática; se ha visto con la adminis-
Etiopatogenia tración de metotrexate de forma prolongada y con
Son varios los factores etiológicos que se recono- la alfametildopa, la oxifenisatina, la hidralazina y
cen en la cirrosis hepática; los más frecuentes son el la amiodarona, luego de un largo período de
alcohol y los virus de la hepatitis B y C. hepatitis crónica.
Alcohol. Dado que solamente el 10 a 15 % de los Entidades de base genética. Hay un grupo de enfer-
alcohólicos crónicos desarrollan una cirrosis hepá- medades hereditarias y metabólicas que se acompa-
ñan de cirrosis hepática, tales como:
hemocromatosis,

216
déficit de alfa1-antitripsina, la enfermedad de Wilson, Anatomía patológica
galactosemia, tirosinemia, porfiria cutánea tarda, Las alteraciones morfológicas más importantes de
fibrosis quística del páncreas y la telangiectasia he- la cirrosis hepática son:
morrágica hereditaria.
Diversas causas. Se puede producir una lesión 1. Puentes fibrosos tabicados por la
hepática igual a la de la hepatitis alcohólica, con proliferación del tejido conectivo colágeno,
esteatosis, fibrosis centrolobulillar y cirrosis, por como bandas delgadas que sustituyen a
medio de la anastomosis yeyunoileal o yeyunocólica lobulillos adyacen- tes múltiples.
en el tratamiento de la obesidad refractaria. Igual 2. Nódulos parenquimatosos de regeneración,
lesión se ha observado en los pacientes diabéticos grandes, mayores de 3 mm de diámetro (ma-
tipo 2 obesos. cronódulos) y pequeños, menores de 3 mm
Causa desconocida. Aproximadamente en el 10 (micronódulos).
a 15 % de los enfermos con cirrosis se desconoce su 3. Desorganización de la estructura de todo el
causa. hígado, fundamentalmente en el interior de
Lo fundamental en el mecanismo de producción los micronódulos, con pérdida de las venas
de la cirrosis hepática es la fibrosis progresiva. En cen- trales y de los cordones de células
el hígado normal, el colágeno intersticial (tipos I parenqui- matosas.
y III) se agrupa en los fascículos portales y alrede-
dor de las venas centrales; en el parénquima hay Aspecto macroscópico
haces ocasionales. Hay una fina armazón reticular El tamaño del hígado varía dentro de límites muy
de colágeno tipo IV en el espacio entre las células amplios. Para Bockus puede ser tan pequeño como
endoteliales sinusoidales y los hepatocitos (espacio de 900 g y tan grande que pase de 3 000 a 4 000 g.
de Disse). En la cirrosis el colágeno de tipos I y III En el tamaño de la víscera influyen dos factores
se deposita en todo el lobulillo, y se encuentran al- fun- damentales: la cantidad de grasa contenida y
teraciones en las células endoteliales sinusoidales. la hi- perplasia celular regenerativa. Todo parece
Todo esto provoca una grave alteración del flujo indicar que en los primeros estadios el hígado es
sanguíneo, por lo que la difusión de solutos entre mayor y se retrae según avanza la enfermedad. Se
los hepatocitos y el plasma es deficiente, sobre todo observan con más frecuencia hígados grandes en la
la del movimiento de proteínas (albúmina, factores cirrosis alco- hólica (micronodular de inicio) que
de coagulación, lipoproteínas). en la posnecró- tica (cirrosis poshepatitis, cirrosis
Todo parece indicar que la célula estrellada que macronodular); en ésta el tamaño del hígado es
se encuentra en el espacio de Disse, la que almacena más pequeño cuanto mayor es la fibrosis.
grasa y vitamina A, es la fuente principal del exceso La cápsula del hígado suele ser opaca y estar en-
de colágeno en la cirrosis. Estas células se activan grosada. La superficie es irregular y está matizada
al desarrollarse la cirrosis, pierden su almacén de de nódulos pequeños y casi uniformemente distri-
ésteres de retinilo y pasan a ser células iguales a buidos en la cirrosis alcohólica, pero con
miofibroblastos. El estímulo para la síntesis y depó- frecuencia mayores y desiguales en la forma
sito de colágeno parte de diferentes fuentes: posnecrótica. En este último caso, el tamaño de los
• Inflamación crónica con la elaboración de nódulos, así como la retracción del tejido fibroso,
citocinas inflamatorias, tales como los factores dan al hígado un con- torno muy irregular.
de necrosis tumoral alfa (FNT-) y beta (FNT- La consistencia de la glándula está aumentada y
 ) e interleucina 1. es mayor en los hígados pequeños que en los gran-
• Producción de citocinas por las células endóge- des, donde los macronódulos están separados por
nas lesionadas (células de Kupffer, células en- profundas depresiones que corresponden a las cica-
doteliales, hepatocitos y células epiteliales de trices fibrosas.
los conductos biliares). El bazo casi siempre está agrandado y a veces
• Alteración de la matriz extracelular. llega a ser enorme. Todas las venas tributarias del
• Estímulo directo de las células estrelladas por sistema porta están dilatadas y tortuosas, aunque no
toxinas. siempre esto es evidente en la mesa de autopsia.
La
217
expresión más característica de esta dilatación Clasificación etiológica y morfológica (mixta)
venosa la constituyen las várices esofágicas. 1. Cirrosis alcohólica.
2. Cirrosis posviral o posnecrótica y criptogenética
Aspecto microscópico (15 %).
Los hepatocitos presentan alteraciones adiposas y 3. Cirrosis biliar.
degeneración, y hay aumento del tejido fibroso; todo • Cirrosis biliar primaria.
en grado variable. Las bandas de tejido conectivo se • Cirrosis biliar secundaria.
extienden desde un espacio porta a otro y forman 4. Cirrosis cardíaca.
anillos donde queda englobados un número varia- 5. Cirrosis metabólica, hereditaria.
ble de lobulillos. A veces el tejido fibroso invade al • Hemocromatosis.
propio lobulillo. En la fase inicial de la cirrosis, cuan- • Enfermedad de Wilson (rara).
do aún hay actividad, el tejido fibroso en su inva- • Deficiencia de alfa1-antitripsina (rara).
sión suele acompañarse de un infiltrado inflamatorio • Galactosemia (poco frecuente).
mononuclear que se localiza en el interior de los • Otros.
tractos y que tiende a desaparecer con el tiempo, a 6. Cirrosis producida por medicamentos.
la vez que dicho tejido fibroso se densifica y retrae 7. Cirrosis de causa diversa.
gradualmente. Una vez que la fibrosis está presente
de forma difusa, por lo general es irreversible. Cuadro clínico
Todas las alteraciones descritas producen una dis- El comienzo de la enfermedad es habitualmente
torsión de la arquitectura de los lobulillos, que a su asin- tomático, estado este que puede durar meses o
vez altera la disposición de los vasos sanguíneos. Se años; otras veces los síntomas se manifiestan de
forman nuevos canalículos biliares, que a menudo forma tan vaga al inicio, que se dificulta
ofrecen un aspecto tortuoso e irregular, lo que pue- valorarlos. En algu- nos casos el diagnóstico es
de contribuir a la colestasis intrahepática que con casual, y al examinar al paciente por otros motivos
se detecta la hepatome- galia con la
frecuencia acompaña a la cirrosis. Clasificación
esplenomegalia palpable o no, así como
La cirrosis hepática se clasifica según criterios mor- alteraciones en las pruebas de función hepática, y
fológicos y etiológicos; sin embargo, se ha compro- se llega al diagnóstico de cirrosis. Éstas son las
bado que varias causas pueden producir la misma cirro- sis compensadas; pero tarde o temprano la
alteración histopatológica, así como una sola causa enferme- dad se manifiesta desde el punto de vista
es capaz de provocar varias alteraciones anatomo- clínico por uno de los síndromes siguientes:
patológicas. Por todo lo anterior, se colige que una insuficiencia he- pática, hipertensión portal y
vez que la cirrosis está presente, se hace muy difícil ascitis.
arribar a un diagnóstico etiológico basándose sola-
mente en la histología, salvo algunas excepciones Síndrome de insuficiencia hepática
que incluyen la hemocromatosis y la deficiencia de La cirrosis comienza prácticamente por cualquiera
alfa1-antitripsina. de los síntomas y signos de la insuficiencia he-
pática.
Clasificación morfológica Astenia. Se presenta en grado variable, según la
Macronodular: Nódulos > 3 mm. evolución del caso.
Micronodular: Nódulos < 3 mm. Fiebre. La fiebre producida sólo por la actividad
Mixta: Presencia de macronódulos y micronó- de la afección hepática no es frecuente, por lo que
dulos. ante ella deben agotarse todas las posibilidades
para demostrar un proceso séptico. Descartadas
Esta clasificación no es útil, ya que no existe una otras cau- sas, la fiebre aparece en la cuarta
relación entre el tamaño de los nódulos y la causa parte de los cirróticos. Es moderada y mantenida.
de la enfermedad. Dolor. Con frecuencia el paciente manifiesta do-
lor en el hemiabdomen superior, que si se intensifi-
ca, debe hacer sospechar un hepatoma.
Dispepsia. Los síntomas dispépticos y la flatu-
lencia son habituales.
218
Trastornos neuropsiquiátricos. Estos síntomas son frecuente hallar ginecomastia bilateral. También
variables y van desde la somnolencia hasta el coma puede encontrarse reblandecimiento y atrofia tes-
(ver el capítulo “Encefalopatía hepática”). ticular, al igual que disminución del vello de la
Ictericia. Se presenta en aproximadamente la mi- barba, del tórax y del pubis. En las mujeres hay
tad de los casos cuando no se trata de una cirrosis trastornos del ciclo menstrual, con reglas escasas e
biliar, en que es constante. Suele ser de moderada a irregulares y, en ocasiones, amenorrea. No está
ligera, aunque a veces se intensifica. Se debe a la clara la rela- ción entre estos trastornos endocrinos
alteración parenquimatosa que dificulta la captación y las anoma- lías halladas en el metabolismo
y conjugación de la bilirrubina, y a la obstrucción hormonal.
intrahepática causada por la distorsión, compresión Hemorragias. En la cirrosis descompensada se
y destrucción de los conductillos biliares ocasiona- ven hemorragias espontáneas en cualquier lugar
das por los tractos fibrosos inflamados, lo que pro- de la economía, producto del trastorno de la
voca un obstáculo al flujo biliar. La colestasis que coagulación que presentan estos pacientes.
se ve en algunos pacientes es por mecanismo extra- Edemas. Se presentan en aproximadamente el 50 %
hepático, ya que en la cirrosis la litiasis biliar es fre- de los casos, y por lo general se deben a la
cuente. A veces se asocia una pancreatitis, que puede hiposeri- nemia y los trastornos hidrosalinos que
producir una oclusión biliar extrahepática, o una comporta la insuficiencia hepática.
hiperdestrucción hemática por toxicidad del al-
cohol, mecanismos inmunitarios o por hiperesple- Síndrome de hipertensión portal
nismo. En ausencia de éste, se describe un síndrome La hipertensión portal (presión > 30 cm de solución
dado por hiperlipemia, anemia hemolítica, hígado salina isotónica) se produce cuando existe un obs-
graso y cirrosis (Zieve). táculo a la circulación de la sangre venosa prove-
Arañas vasculares. Estas formaciones se presen- niente del territorio portal. De acuerdo con el sitio
tan comúnmente en la cirrosis, pero se ven también donde se localice la obstrucción, se clasifica en pre-
en el curso de otras lesiones crónicas o agudas del sinusoidal, sinusoidal y postsinusoidal. En los pa-
hígado, y en otras situaciones como el embarazo, cientes cirróticos, este síndrome, de tipo sinusoidal,
personas sanas, etc. Consisten en una dilatación aparece como complicación en fases avanzadas de
arteriolar central de la que parten pequeños capila- la enfermedad y es la consecuencia de la resistencia
res, en forma radiada, como patas de araña; el cen- que ofrecen la fibrosis y los nódulos de regenera-
tro es pulsátil y cuando se presiona, palidece el resto ción al flujo de la sangre portal, una vez desorgani-
de la lesión. Se distribuyen con mayor frecuencia zado el lobulillo.
en la cara, cuello, hombros y la porción superior del Las manifestaciones clínicas fundamentales de la
tórax. Se acompañan de otro tipo de dilataciones hipertensión portal son: la esplenomegalia, que se
vasculares cutáneas muy finas, sin arteriola central, palpa en el 50 % de los cirróticos, aunque por
denominadas telangiectasias. Se considera que las laparoscopia se evidencia un mayor porcentaje, y
arañas vasculares se deben a un aumento de la for- en la necropsia se llega a demostrar hasta en el 80
mación periférica de estrógenos por una reducción % de los casos; tiene como consecuencia el
del aclaramiento hepático de su precursor, la hiperes- plenismo.
androstendiona. La hemorragia por ruptura de várices
Eritema palmar. La mayoría de los cirróticos pre- esofagogás- tricas, que por lo general es abundante,
sentan un enrojecimiento de las eminencias tenar e pone en pe- ligro la vida del paciente y tiene
hipotenar y el pulpejo de los dedos, llamado eritema tendencia a las recidivas; se produce por el
palmar. Aunque se le encuentra en otras enfermeda- desarrollo de cortocir- cuitos colaterales
des y aun en personas sanas, su intensidad está en portosistémicos. Al carecer de válvulas, el
relación con el grado de insuficiencia hepática del sistema porta permite el flujo retrógra- do de la
cirrótico. Su patogenia es similar a la de las arañas sangre desde el sistema venoso porta de presión
vasculares. elevada hacia la circulación venosa sistémi- ca, que
Esfera endocrina. Se reporta una reducción de la tiene una presión más baja. Se establece un flujo
libido en los hombres, en los que además no es in- colateral en las venas alrededor del recto (he-
morroides), en la unión cardioesofágica (várices
eso- fagogástricas), en el espacio retroperitoneal y
en el
219
ligamento falciforme del hígado (colaterales perium- de las concentraciones plasmáticas de prostaglandi-
bilicales o de la pared abdominal). La circulación nas o catecolaminas.
colateral de la pared abdominal se ve en el abdomen Actualmente se acepta que el factor desencade-
superior y tórax inferior, y en raras ocasiones como nante para la aparición de la ascitis, pudiera ser la
venas epigástricas tortuosas que salen radialmente retención inadecuada de agua y sodio por el riñón
del ombligo y se dirigen hacia el apéndice xifoides (“flujo aumentado”), o la reducción del volumen
y el reborde costal (cabeza de medusa). intravascular (“llenado insuficiente”) por la reten-
Existen además otras causas de sangramiento di- ción inadecuada de líquido en el lecho vascular
gestivo en el paciente cirrótico, como son las úlce- esplácnico por la hipertensión portal. El riñón, al
ras gastroduodenales y las gastritis hemorrágicas.
detectar esta disminución aparente del volumen in-
La ascitis y la encefalopatía son también elemen-
travascular, retiene sodio y agua; o la
tos del síndrome de hipertensión portal.
vasodilatación arteriolar producida por la
hipertensión portal trae como consecuencia un
Síndrome ascítico
llenado insuficiente del es- pacio vascular arterial,
La ascitis constituye un fenómeno importante en la
cirrosis hepática. Se trata de una ascitis libre y se lo que estimula, mediado por barorreceptores, el
presenta en más del 60 % de los cirróticos. La pre- sistema renina-angiotensina, el tono simpático y la
sencia de una gran ascitis condiciona un aumento liberación de hormona antidiu- rética.
marcado del abdomen, que contrasta con la delga- En relación con las manifestaciones clínicas de
dez de la cara y las extremidades (si acaso las pier- la ascitis, el paciente nota el aumento de volumen
nas parecen gruesas, es por el edema) Objetivizando del abdomen y puede tener dificultad
este contraste, Fiessinger decía que el cirrótico se respiratoria si acumula una gran cantidad de
inunda por abajo pero se deseca por arriba. líquido dentro de la cavidad peritoneal. Cuando
Desde el punto de vista patogénico, la ascitis obe- esta cantidad es mayor de 500 ml, en el examen
dece a varios factores: está demostrada la presencia físico del abdomen se en- cuentra matidez
de concentraciones elevadas de adrenalina y nora- cambiante (declive) por la oleada de aquél. Se
drenalina, por lo que hay un aumento del estímulo debe determinar la presencia de factores
simpático central en los pacientes cirróticos con as- desencadenantes de la ascitis que aparece o aumen-
citis, lo que disminuye la natriuresis al activar el sis- ta: no cumplimiento del tratamiento farmacológico,
tema renina-angiotensina y reducir la sensibilidad consumo excesivo de sal, infección intercurrente,
al péptido natriurético auricular. La hipertensión empeoramiento de la hepatopatía, trombosis de la
portal es uno de los factores más importantes en la vena porta o aparición de un carcinoma hepatoce-
producción de ascitis al aumentar la presión hidros- lular.
tática dentro del lecho vascular esplácnico. Otro fac- Para confirmar el síndrome ascítico, se realiza
tor que contribuye a la formación de ascitis es la una paracentesis con aguja de pequeño calibre. Este
hipoalbuminemia, que al disminuir la presión oncó- pro- ceder se utiliza también para el seguimiento
tica plasmática, ayuda a la salida de líquido hacia la
evolu- tivo del enfermo, sobre todo cuando existe
cavidad peritoneal desde el plasma. La linfa hepáti-
fiebre inexplicable o dolor abdominal, lo que
ca puede, por la distorsión y obstrucción de los
obliga a des- cartar infección, tumor u otras posibles
sinusoides y de los linfáticos hepáticos, exudar li-
causas o com- plicaciones de la ascitis.
bremente en la superficie del hígado cirrótico y así
participar en la producción de ascitis.
Desempeñan un importante papel en el manteni- Alteraciones hepáticas
miento de la ascitis, los factores renales, ya que en Por lo general existen alteraciones en el volumen
estos pacientes hay un aumento de la reabsorción del órgano, que aparece normal o aumentado de ta-
renal de sodio, tanto en el túbulo proximal como en maño o disminuido. Cuando es palpable, se nota su
el distal; en este último por el crecimiento de la ac- borde fino, cortante y la superficie nodular.
tividad de renina plasmática y el hiperaldosteronis- Exámenes complementarios
mo secundario. Contribuye a la retención de sodio Ninguna prueba aislada proporciona suficiente in-
la vasoconstricción renal, producto de un aumento formación acerca del estado funcional de la
glándula
220
hepática, por lo que es necesario valorarlas en con- CIRROSIS PORTAL
(tipo Läennec)
junto.
Bilirrubina. Es normal en 40 o 50 % de los PROTIDOS
% g/100ml
cirróticos. Puede estar aumentada, tanto la directa A 30.8 1.69
como la indirecta, lo que expresa una alteración en  7.2 0.39
la captación, en la conjugación o en su eliminación.  6.7 0.37
 12.7 0.70
La no conjugada predomina sobre la conjugada en  42.6 2.33
los casos en que hay hemólisis. T 100.0 5.48 A
Transaminasas (aminotransferasas). Están au-

mentadas de foma moderada y en la cirrosis poco
activa suelen ser normales. Cuando están muy ele-
vadas, traducen una citólisis marcada. 
Fosfatasa alcalina. Está poco aumentada; en oca-  

siones se hallan valores normales en la cirrosis al-
cohólica y en la posnecrótica, o también elevados,
sobre todo en la cirrosis biliar y en caso de coexistir
un hepatocarcinoma.
Gammaglutamiltranspeptidasa. Está aumentada Fig. 22.1. Electroforesis de proteínas en un caso de cirrosis
en la cirrosis alcohólica y cuando hay colestasis. portal. Obsérvese la marcada hiposerinemia y la hipergamma-
Proteínas plasmáticas. El metabolismo proteico, globulinemia.
tan vinculado al hígado, se altera en la cirrosis; hay
disminución de la serina, con una hipergammaglo- reticulocitos y de la bilirrubina no conjugada en
bulinemia e inversión del índice serina-globulina. oca- siones, cuando hay hemólisis. A veces hay
El aumento de las globulinas se explica por la llega- leucope- nia y trombocitopenia, como
da masiva de estímulos antigénicos a las células del expresión de un hiperesplenismo.
sistema mononuclear fagocítico, que producen anti- Electrólitos en el plasma. Los electrólitos
cuerpos, al no depurarse en el hígado los antígenos presen- tan muchas anormalidades en las fases
originados en el intestino, la mayoría bacterianos, avanzadas de la cirrosis. El sodio disminuye cuando
los cuales pasan de forma directa a la circulación hay ascitis, porque se acumula en el líquido;
general. asimismo, desciende considerablemente después de
Electroforesis de las proteínas. Este examen tie- las paracentesis, al reacumularse el líquido. El
ne gran valor, sobre todo en los estadios iniciales de potasio sérico, que se excreta sin dificultad, se
la enfermedad. Se comprueba el aumento de la frac- reduce a causa de la res- tricción alimentaria.
ción gamma de las globulinas y la tendencia a des- Orina. Es común encontrar albuminuria y ami-
cender o el franco descenso de la serina (Fig. 22.1). noaciduria en las cirrosis avanzadas.
Colesterol. A menudo es normal, aunque puede Heces fecales. Son oscuras en caso de
descender en la cirrosis alcohólica y aumentar mu- sangramien- to importante del tubo digestivo alto, o
cho en la biliar. Los ésteres del colesterol a veces hipocólicas en las cirrosis biliares. Se pueden
alcanzan valores muy bajos cuando la cirrosis está detectar hemorra- gias ocultas por sangramiento de
avanzada. várices esofágicas o de una úlcera gastroduodenal.
Coagulograma. En realidad se encuentra cualquier Gammagrafía hepática con tecnetio (Tc-99m).
alteración de los factores de la coagulación, excepto Se utiliza para medir la función de las células de
del VIII. Las plaquetas estarán normales o dismi- Kupffer. En la cirrosis hepática existe una
nuidas. disminución tanto en el número de estas células
Hemograma. Resulta común una anemia mode- como en su función, lo que hace que la captación
rada, que es microcítica hipocrómica si se produce de este radiocoloide sea irregular en el hígado y
por sangramientos; macrocítica hipercrómica cuan- esté aumentada en la médu- la ósea y en el bazo. La
do es por la toxicidad del alcohol en la médula, y reduccción de la función de las células de Kupffer
normocítica acompañada de aumento de lo s desempeña un importante papel en la elevada
incidencia de las sepsis en los pacientes cirróticos.
221
Ecografía abdominal. Permite determinar el ta- llos pacientes a los que se les va a practicar un cor-
maño del hígado y del bazo. Debe realizarse con tocircuito portosistémico y se necesita hacer una
Doppler para diagnosticar cantidades mínimas de eva- luación preoperatoria más exhaustiva, o
ascitis cuando hay duda en el examen físico o cuan- cuando no se ha podido realizar el cateterismo
do no se está claro en la causa de la ascitis reciente. percutáneo para analizar la fase venosa y definir si
Detecta la presencia de colaterales portosistémicas. la vena porta está permeable, así como la dirección
El diámetro aumentado de las venas porta y esplénica del flujo sanguí- neo portal.
demuestra de forma indirecta la presencia de una Esofagoscopia fibróptica. Para diagnosticar la
hipertensión portal. Permite, además, diagnosticar presencia de várices esofágicas.
el cáncer primario del hígado, de ahí que se reco- Cateterismo percutáneo y transhepático con
mienda en todo paciente con cirrosis hepática la rea- aguja fina de la vena porta. Aunque no siempre es
lización seriada de ecografías cada 4 o 6 meses. nece- sario, se utiliza para medir la presión dentro
Radiología. El esofagograma con papilla de ba- rio de la vena porta de forma directa, cuando el
poco espesa descubre la presencia de várices ultrasonido con Doppler no es concluyente.
(Fig. 22.2). El estudio se prolongará al estómago y Cateterismo transyugular de las venas suprahe-
al duodeno, donde se suelen detectar úlceras y várices páticas. Sirve para medir de forma indirecta la pre-
en el polo superior gástrico. La angiografía mesen- sión dentro de la vena porta. Deben medirse las
térica y hepática (Fig. 22.3) debe realizarse a aque- presiones libre y enclavada dentro de las venas su-
prahepáticas; esta última se encuentra aumentada
en la hipertensión portal sinusoidal (por tanto, en la
cirro- sis) y postsinusoidal.
Líquido ascítico. El examen de este líquido obte-
nido por medio de la paracentesis es indispensable
cuando se valora un enfermo con ascitis; se debe
determinar: conteo celular, albúmina, tinción de
Gram y cultivo; además, de ser necesario se indican
otros estudios: amilasa, citología y cultivo para
micobacterias.
La presencia de polimorfonucleares en número
igual o superior a 250/mm3 hace plantear una
Fig. 22.2. Várices esofágicas por hipertensión portal en una
peritonitis bacteriana espontánea, y un porcentaje
cirrosis hepática. elevado de linfocitos sugiere peritonitis tuberculo-
sa. Si el líquido es hemático, hay que sospechar una
causa neoplásica o la existencia de una hipertensión
portal severa.
Actualmente, para clasificar la ascitis, se
necesita determinar el gradiente de albúmina entre
3
el suero y el líquido ascítico (GASA), el cual se
1 obtiene restan- do la concentración de albúmina en el
líquido ascítico de la cifra sérica. Un GASA
elevado ( 1,1g/dl) se ve en la cirrosis hepática y
2 pronostica que la causa es la hipertensión portal. Si
el GASA es < 1,1 g/dl, la ascitis es secundaria a
tuberculosis, pancreatitis o a una neoplasia.
Laparoscopia y biopsia. Éstas son las investiga-
ciones más importantes, toda vez que jamás el
diag- nóstico de cirrosis puede sustentarse, como
Fig. 22.3. Esplenoportografía en un caso de cirrosis hepática
con gran hipertensión portal. Nótese la gran dilatación de la no sea sobre la base del examen histológico. Sin
vena porta (1) y de la esplénica (2), así como de las venas embargo, en ocasiones hay que conformarse con
tributarias del sistema, en particular las del fundus gástrico (3). la imagen que brinda la visión laparoscópica, ya
que los tras-
222
tornos de la coagulación que padece el enfermo Peritonitis bacteriana espontánea
desaconsejan la práctica de la biopsia. Es posible encontrar la PBE en enfermos con cirro-
Diagnóstico sis y ascitis sin que exista un foco infeccioso causal
demostrable. Los pacientes con hepatopatías en
El diagnóstico de cirrosis hepática debe establecer- eta- pas finales son muy sensibles a presentar la
se desde varios puntos de vista: clínico, anatómico, PBE, complicación muy grave, que tiene una
etiológico y funcional. mortalidad elevada.
El diagnóstico clínico se plantea ante un paciente Patogenia. Aunque aún se desconoce, sí se sabe
con algunos de los componentes del síndrome de que la mayoría de las bacterias que causan la PBE
insuficiencia hepática o del de hipertensión portal, provienen del intestino, atraviesan la pared intesti-
o con una ascitis. Por lo general no ofrece dificulta- nal y los linfáticos, y por vía hematógena llegan al
des, salvo en el caso de enfermos monosintomáticos líquido ascítico.
o con pocos síntomas, en que puede confundirse con Cuadro clínico. Las manifestaciones clínicas ca-
otras afecciones. racterísticas son: fiebre con escalofríos, a veces de
El diagnóstico anatómico se establece con la comienzo súbito; dolor abdominal difuso con reac-
laparoscopia y sobre todo con la biopsia hepática, ción peritoneal, y un líquido ascítico turbio que tie-
que precisa el tipo histológico de cirrosis. ne aumento de los leucocitos y positividad de los
El diagnóstico funcional, que determina si la cultivos bacterianos.
cirrosis está compensada o descompensada, es ne- Lo más frecuente es que los síntomas se presen-
cesario para establecer una terapéutica adecuada. ten de forma no típica, y en algunos enfermos sólo
El diagnóstico etiológico de la cirrosis hepática haya un aumento de la ictericia o de la encefalopa-
es importante, ya que el tratamiento de la causa en tía, sin el dolor peritoneal característico, por lo que
algunos pacientes puede cambiar de forma satisfac- el médico debe tener presente esta complicación
toria el curso de la enfermedad. Al conocerla, se para que su diagnóstico no se haga demasiado
define mejor el pronóstico, y en algunos casos se tarde. Exámenes complementarios. En el líquido se
llegan a tomar medidas profilácticas o incluso tera- en- cuentra una cifra de leucocitos > 500 células/L
péuticas con sus familiares. (con una proporción del 50 % o más de
polimorfonuclea- res) o leucocitos
Como cirrosis compensada se conoce a la fase de
polimorfonucleares  a 250/mm3. Estas cifras
la enfermedad en la que no existen prácticamente permiten diagnosticar una PBE mien- tras llega el
manifestaciones clínicas o éstas son discretas, a lo resultado del cultivo del líquido ascítico y se
sumo una esplenomegalia o alguna expresión cutánea determina el germen: lo más frecuente, bacilos
de enfermedad hepática. En los exámenes comple- entéricos gramnegativos y más raro neumococos u
mentarios encuentra aumento de las gammaglobuli- otras bacterias grampositivas.
nas y aceleración de la eritrosedimentación. Las Cuando en el líquido ascítico hay más de 10 000
cirrosis descompensadas son aquellas que no pue- leucocitos/L, o existen varios microrganismos o
den enmarcarse dentro de estos límites y presentan no se obtiene una respuesta después de 48 h con el
tra- tamiento antibiótico específico, se plantea
manifestaciones de insuficiencia hepática, sangra-
que la peritonitis es secundaria a una infección en
mientos, trastornos neurológicos, etcétera. otra par- te del organismo.
Complicaciones Existe una variante de la PBE, la bacterioascitis
• Hipertensión portal y sus consecuencias (por monomicrobiana no neutrófila, en la que el cultivo
ejemplo: várices esofagogástricas hemorrágicas del líquido ascítico es positivo para bacterias, pero
y esplenomegalia congestiva). la cifra de polimorfonucleares es menor de 250 cé-
• Ascitis. lulas/L. Se señala que la hepatopatía de estos en-
• Encefalopatía hepática. fermos es menos grave. A pesar de que la mayoría
• Peritonitis bacteriana espontánea (PBE). de ellos ya no tienen la bacterioascitis cuando se
• Síndrome hepatorrenal. les realiza la paracentesis siguiente,
aproximadamente el 40 % adquieren una PBE
• Carcinoma hepatocelular.
clásica, por lo que de- ben hacérseles paracentesis
seriadas si se diagnosti- ca esta variante.
223
Síndrome hepatorrenal Cirrosis compensada
Concepto. Se llama así a la insuficiencia renal agu- En esta fase deben evitarse los excesos físicos y el
da que aparece como complicación grave en el pa- agotamiento, y permitirse sólo una actividad ligera
ciente con cirrosis y ascitis, que se caracteriza por o moderada. La dieta será normoproteica y normo-
una hiperazoemia progresiva, retención ávida de calórica y se prohibirá el uso del alcohol. Deben vi-
sodio y oliguria, sin que haya ninguna causa especí- gilarse, detectarse y tratarse de forma adecuada
fica de disfunción renal. todos los factores capaces de comprometer la
función he- pática, tales como fármacos
Patogenia. Se desconoce y parece que contribu-
hepatotóxicos, infeccio- nes, deshidratación, etc. Se
ye a ello un trastorno en la hemodinámica renal, pues
prohibirá la ingestión de ácido acetilsalicílico o
hay una vasoconstricción con disminución del flujo derivados, por la posibilidad que tienen de producir
sanguíneo renal a nivel de la corteza. Se plantea la SDA. Pueden utilizarse do- sis pequeñas de
existencia de un desequilibrio de determinados me- anabólicos si el paciente tiene aste- nia y
tabolitos del ácido araquidónico, como la prostaglan- anorexia. Hay que evitar al máximo las
dina y el tromboxano. operaciones electivas, y de tenerse que practicar al-
Cuadro clínico. Esta complicación se puede des- guna, se discutirá con el anestesiólogo la situación.
encadenar luego de un sangramiento digestivo alto
(SDA) grave, en el curso de un cuadro séptico o por Cirrosis descompensada
un tratamiento intensivo con diuréticos o de para- En esta etapa el reposo debe extremarse y es prefe-
centesis evacuadoras; otras veces no es posible de- rible hospitalizar al paciente. Se indicará una dieta
terminar la causa. El paciente presenta hipotensión normoproteica y se vigilará el estado de conciencia
arterial y oliguria que va empeorando. del enfermo o de cualquier signo que alerte sobre la
Exámenes complementarios. Hay hiponatremia y posibilidad del coma; en este caso hay que restrin-
una hiperazoemia que va en aumento. El sodio en gir las proteínas y limitar la ingestión de sodio a
0,5 o 1 g diario.
orina es muy bajo, 5 mmol/L. El examen del sedi-
A continuación se expone el tratamiento de las
mento urinario es normal. La estructura renal es tam-
principales manifestaciones de la descompensación
bién normal. Esta complicación debe diferenciarse
hepática, con excepción de la hemorragia digestiva
de la hiperazoemia prerrenal y de la necrosis tubu-
y de la encefalopatía hepática, que se tratan en
lar aguda por hipovolemia o nefrotoxicidad. otros capítulos.
Pronóstico Hipertensión portal. Se logra disminuir la presión
Los pacientes con cirrosis compensada (aquellos que portal mediante el bloqueo betadrenérgico con pro-
nunca han tenido ascitis, SDA o encefalopatía he- pranolol y nadolol, por sus efectos vasodilatadores
pática) tienen una supervivencia prolongada. El 50 % sobre el lecho arterial esplácnico y el sistema veno-
de ellos están vivos 10 años después de habérseles so porta, junto a la reduccción del gasto cardíaco.
hecho el diagnóstico. El pronóstico es malo en la De ahí el uso profiláctico de los bloqueadores beta-
cirrosis hepática que se ha descompensado, pues la drenérgicos (propranolol o nadolol) para disminuir
supervivencia en estos casos es de 3 años en un 30 % el riesgo de sangramiento en los pacientes con
de los enfermos. várices esofágicas de tamaño moderado o grande,
Las causas más frecuentes de muerte son insufi- que nun- ca han sangrado y no tengan
ciencia hepática, hemorragia digestiva, infecciones contraindicaciones, en dosis que descienda en un
y el cáncer primario de hígado. 25% la frecuencia cardía- ca en reposo. Se señala
que el propranolol, además, es capaz de reducir la
Tratamiento incidencia de sangramiento por una gastropatía
congestiva y várices gástricas por hipertensión
El tratamiento del cirrótico tiene como objetivos
portal. No se ha demostrado que la escleroterapia
detener hasta donde sea posible el progreso de la
de forma profiláctica disminuya el riesgo del
enfermedad, tratar las complicaciones y ayudar al
sangramiento inicial. Se debe realizar en- doscopia
hígado a recuperarse al máximo. cada 2 años a los enfermos con cirrosis hepática
para diagnosticar las várices y actuar en
consecuencia. Realmente, la hipertensión portal se-
224
cundaria a cirrosis hepática no es reversible; en aque- hasta 160 mg diarios. Estas combinaciones de
llos casos que se determine, el trasplante hepático diuréticos deben ser utilizadas con mucho cui-
brindará un beneficio. dado, para evitar la disminución del volumen
Ascitis. El control de la ascitis coadyuva a mejo- plasmático, hiperazoemia e hipocaliemia, que
rar el estado general y el apetito del paciente, así pueden llevar al paciente a una encefalopatía.
como a disminuir el peligro de las complicaciones. 5. Controlar regularmente los electrólitos en el
El tratamiento tiene como objetivo la reducción pro- suero y la orina, y la creatinina en la sangre.
gresiva del líquido ascítico; una guía de su efectivi- Esto permite, entre otras cosas, medir la
dad es el peso del enfermo, que debe bajar a razón respuesta terapéutica de los diuréticos. Se
de 0,5 kg/día si no hay edemas, y 1 kg/día si existen puede deter- minar la dosis mínima eficaz de
éstos. Los enfermos con ascitis moderada pueden la espirono- lactona, al encontrar en la orina
ser tratados de forma ambulatoria (ver más adelan- un aumento del sodio con una disminución
te), pero los que tienen una gran ascitis deben ingre- del potasio, lo cual es expresión de una
sarse, para de esta forma controlar su peso diario, inhibición competiti- va útil de la
las concentraciones de electrólitos y el tratamiento aldosterona. El hallazgo de una hiperazoemia
indicado, el cual contempla los siguientes aspectos: o una hipercaliemia, indica que estamos en la
1. Reposo. En ocasiones se indica el reposo es- dosis máxima de la espironolac- tona, y que se
tricto en cama, dado que el filtrado glomerular debe reducir.
mejora con el decúbito supino.
6. Paracentesis evacuadoras. Se han obtenido
2. Restricción de sodio. Realmente es lo más im-
bue- nos resultados como inicio del
portante en el tratamiento. Se indica una dieta
tratamiento, más que con el reposo en cama y
con 800 mg de sodio (2 g de NaCl), con la cual
el uso de diuréti- cos, en aquellos pacientes
se logra un balance negativo de sodio y un au-
que tienen una asci- tis abundante y han
mento de la diuresis. Con estas dos medidas, el
reposo en cama y la restricción de sodio, se tenido que ingresar. Para ello se debe extraer
logra una buena respuesta si la ascitis es re- el líquido ascítico por me- dio de una cánula
ciente, la hepatopatía que tiene el paciente es peritoneal, cumpliendo con las normas de
reversible, se puede resolver el factor desenca- asepsia y con un estricto control
denante y la eliminación de sodio por la orina hemodinámico y de la función renal. Se debe
es alta con función renal normal. administrar albúmina mediante infusión EV
3. Ingestión de líquidos hasta 1 000 ml en 24 h, en aquellos enfermos que no tengan edemas
sobre todo si existe hiponatremia dilucional peri- féricos, para así prevenir que se
severa (Na < 120 meq/L). produzca una disminución del espacio
4. Diuréticos. Se indican si con las medidas ante- intravascular con hi- potensión. Luego se le
riores no se obtiene un aumento de la diuresis indica como manteni- miento la restricción de
y una disminución del peso corporal. Se utiliza sodio y el tratamiento diurético en la forma ya
un inhibidor de la aldosterona, la espironolac- antes explicada, para de esa forma evitar que
tona, y también otros que actúan sobre el túbulo la ascitis recurra.
distal: amilorida y triamtereno. Espironolacto-
na: 1 tab (25 mg) 4 veces al día, que se aumen- Cerca del 10 % de los pacientes con una cirrosis
ta a razón de 100 mg/día cada 3 o 4 días, hasta hepática avanzada tienen una ascitis “rebelde” o
una dosis máxima que no es frecuente sea ma- después de una paracentesis evacuadora reaparece
yor de 400 mg/día. Si no se logra una buena el líquido de forma brusca. En estos casos se indica
respuesta porque existe una ávida absorción de una paracentesis y se extraen de 4 a 6 L a los que
sodio a nivel del túbulo proximal, se añade un tienen edema periférico; a los que no lo presenten
diurético de mayor potencia, como furosemida, debe asociarse albúmina a una dosis de 6 a 8 g /L
una tiazida o ácido etacrínico; por ejemplo: es- de líquido ascítico extraído, para que el proceder
pironolactona (100 a 200 mg en 24 h) con tenga resultado, lo que es muy costoso. Debe
furosemida (40 mg) e ir aumentando la dosis tenerse en cuenta que las paracentesis a repetición
exponen al enfermo al riesgo de la PBE. En
algunos de éstos se ha logrado mejorar la ascitis
con la realización de un cortocircuito porto-cava
látero-lateral, sin olvidar que estos pacientes tienen
un alto riesgo quirúrgico.
225
Antiguamente, esta ascitis “rebelde” se trataba por
medio de la implantación quirúrgica de un cortocir- CIRROSIS
cuito peritoneo-venoso de plástico, mediante una
válvula en un solo sentido sensible a la presión, que
ALCOHÓLICA
hacía que el líquido ascítico pasara de la cavidad
abdominal a la vena cava superior. Este proceder se Concepto
ha visto afectado por la gran cantidad de complica-
La cirrosis alcohólica o cirrosis de Laennec es el
ciones, tales como coagulación intravascular dise-
minada, infección y trombosis del cortocircuito. En cuadro clínico-histológico final e irreversible de la
la actualidad, la ascitis “rebelde” se ha podido con- enfermedad hepática alcohólica, que se encuentra
trolar mediante la realización de un cortocircuito en los pacientes que llevan más de 10 años
portosistémico intrahepático transyugular (TIPS), ingirien- do bebidas alcohólicas y se presenta de
aunque en algunos enfermos la descompresión no forma silen- te o insidiosa, aunque en ocasiones lo
quirúrgica portal, a la vez que ha movilizado el lí- hace de manera dramática por una de sus
quido ascítico, ha provocado una encefalopatía he- complicaciones; desde el punto de vista
pática grave. El trasplante hepático es en realidad el histológico, se caracteriza por cica- trización
tratamiento definitivo del paciente con una ascitis difusa, pérdida homogénea de las células hepáticas
“rebelde”. con nódulos pequeños de regeneración, lo que ha
Peritonitis bacteriana espontánea. Cuando se sos- hecho que en ocasiones se le llame cirrosis
peche el diagnóstico, hay que comenzar el tratamien- micronodular.
to con antibióticos de forma empírica, con La cirrosis micronodular puede encontrarse en
cefotaxima o con ampicillín y un aminoglucósido. otras lesiones hepáticas, por lo que no debe consi-
Se prefiere la cefotaxima en la dosis de 2 g EV cada 8 derarse siempre sinónimo de cirrosis alcohólica. Se
o 12 h, o ceftriaxona, de 500 a 1 000 mg EV cada 12 h, debe señalar que esta forma de cirrosis evoluciona
durante 5 a 10 días. Cuando se aísle el germen cau-
en ocasiones hacia una macronodular y al final el
sal, debe indicarse el antibiótico específico. La res-
hígado tiene un patrón mixto micronodular y
puesta al tratamiento es buena, si en el líquido
macronodular.
ascítico obtenido de las paracentesis efectuadas
cada 48 h hay un descenso de más del 50 % de leu- Etiopatogenia
cocitos polimorfonucleares y son negativos los cul-
tivos. Es muy frecuente que el 70 % de los pacientes Si bien la causa más frecuente de cirrosis es el
presenten una recidiva durante el año que continúa alco- holismo, aún no está bien definida la
al primer episodio de PBE, por lo que está indicado cantidad y el consumo de alcohol que es necesario
el tratamiento profiláctico de mantenimiento con para producir- la. Algunos señalan que 80 g
norfloxacino, en la dosis de 400 mg/día, para evitar diarios de etanol (8 cervezas, 1 L de vino o de
ésta. También se ha utilizado el trimetoprim-sulfa- licor) durante 20 años es la cantidad necesaria para
metoxazol durante 5 días a la semana, así como el causar la cirrosis, y que el riesgo relativo aumenta
ciprofloxacino, 750 mg una vez por semana. con 40 a 60 g diarios; en otros se ha presentado a
Síndrome hepatorrenal. Se obtiene mejoría cuan- los 10 años de estar bebien- do esa cantidad de
do se logra controlar las alteraciones hemodinámi- etanol. En el alcohólico es muy frecuente que se
cas del enfermo, pues disminuye la ascitis, aumenta encuentre una desnutrición protei- co-calórica,
el retorno venoso y mejora el gasto cardíaco, con lo producto no sólo de la mala alimenta- ción de
que se incrementa el flujo plasmático renal y la fil- estos pacientes, sino además del anormal
tración glomerular. Deben tratarse las infecciones y metabolismo de los nutrientes. Todo esto interviene
suspender los medicamentos nefrotóxicos. El mejor en la evolución de la hepatopatía alcohólica. En las
tratamiento, de ser posible, es resolver la causa con mujeres, la cirrosis alcohólica se presenta con me-
el trasplante hepático. nor cantidad de consumo de alcohol que en el hom-
A continuación se expondrán brevemente la cirro- bre, por lo que esta susceptibilidad debe estar
sis alcohólica y la biliar, que dadas sus causas res- relacionada con factores hormonales y con el pobre
pectivas tienen sus propias particularidades. nivel de actividad de alcohol deshidrogenasa en la
mucosa gástrica, lo que provoca una menor capaci-
dad metabólica del etanol. Aún no está definida la
226
alteración genética, pero se ha visto hepatopatía al- Exámenes complementarios
cohólica en gemelos monocigotos.
Aparte de los ya descritos:
El alcohol produce varios tipos de lesiones en el Hemograma. Anemia hemolítica, debido a la al-
hígado: hígado graso alcohólico, hepatitis alcohóli- teración que se produce en la membrana
ca y cirrosis alcohólica; se señala que pocas veces eritrocitaria, en forma de espolones (acantocitosis),
se presentan de forma independiente y que en un por los efec- tos a ese nivel de la
mismo enfermo se suelen encontrar características hipercolesterolemia.
de las tres. El precursor principal de la cirrosis alco- Magnesio. Hay hipomagnesemia.
hólica es la hepatitis alcohólica, en la que hay una Fosfato. Se encuentra hipofosfatemia.
inflamación con infiltración leucocitaria de neutró- Diagnóstico
filos y linfocitos en el hígado, hepatocitos necróticos La cirrosis alcohólica se plantea ante un paciente
y, además, hialinosis alcohólica; luego se produce que tiene el antecedente de haber ingerido bebidas
la cicatrización que se acompaña de fibrosis. El de- alcohólicas de forma abundante desde hace más
pósito de colágeno alrededor de la vena central (es- de 10 años, y al que se le encuentran manifestacio-
clerosis hialina central), es lo que hace plantear la nes compatibles con una hepatopatía crónica.
evolución hacia la cirrosis panlobular. Si el paciente Pronóstico
continúa ingiriendo bebidas alcohólicas y se man-
Los casos de cirrosis alcohólica complicados con
tiene la destrucción de los hepatocitos, surgen los
hi- pertensión portal, ascitis y encefalopatía,
fibroblastos en el lugar de la lesión, que estimulan a
tienen muy mal pronóstico y su mortalidad
que se forme el colágeno. En las zonas periportales
hospitalaria es superior al 50 %. Mediante la
y pericentrales hay tabiques reticulares de tejido
siguiente fórmula: 4,6 .
conectivo, los que además rodean grupos pequeños
[tiempo de protrombina - tiempo de control (en se-
de hepatocitos que sobrevivieron, se regeneraron y
gundos)] + bilirrubina sérica (m/L)/17, se puede
formaron nódulos. La pérdida celular es mayor que
establecer una diferencia entre los que tienen peor
su sustitución. El hígado disminuye de tamaño, toma pronóstico (valor > 32).
un aspecto nodular y se endurece, debido a que per- Los pacientes que han presentado alguna de las
siste la destrucción de las células hepáticas y a la complicaciones conocidas y continúan ingiriendo
formación de colágeno. bebidas alcohólicas, a los 5 años tendrán una super-
vivencia menor de 50 %. Aquellos que se mantie-
Cuadro clínico nen sin tomar poseen un mejor pronóstico. En
Puede ser asintomática y en ocasiones se detecta en resumen, el pronóstico de los enfermos con cirrosis
el curso de una intervención quirúrgica o en la ne- alcohólica es sombrío y casi todos fallecen por
cropsia. Otras veces se presenta de forma insidiosa SDA masivos por várices esofágicas, encefalopatía
y evoluciona durante semanas o meses de manera hepá- tica o por ambos.
progresiva, y se evidencia después de 10 o más años
de tomar bebidas alcohólicas en la cantidad ya ex- Tratamiento
presada antes. Es frecuente encontrar al enfermo con 1. Prohibir la ingestión de bebidas alcohólicas.
marcada desnutrición y notable pérdida de peso, 2. Suplementos multivitamínicos. Dosis elevadas
emaciado y asténico. Unido a las manifestaciones de tiamina parenteral en aquellos pacientes
de insuficiencia hepática, hipertensión portal y as- con enfermedad de Wernicke-Korsakoff.
citis, ya descritas, se encuentra hipertrofia de las Fosfato y magnesio.
glándulas parótidas y lagrimales, así como la con- 3. Benzodiacepinas. En los enfermos que presen-
tractura palmar de Dupuytren, que se debe a una ten los signos de supresión: hipertensión arte-
rial, taquicardia y agitación.
fibrosis de la fascia palmar, lo que ocasiona una
4. El resto del tratamiento ya explicado antes.
con- tractura de los dedos en flexión; esto es
5. Trasplante ortotópico del hígado. Está indica-
producto del alcoholismo. Se palpa una
do en aquellos casos que a pesar de haber
hepatomegalia dura y nodular, las más de las veces aban- donado la ingestión de bebidas
pequeña. alcohólicas,
227
evolucionan hacia la insuficiencia hepática des- aunque aún no están claros los factores que la in-
compensada. La supervivencia es de un 15 %, ducen.
si el paciente deja de tomar 6 meses antes de la
intervención. Anatomía patológica
En la fase final el hígado tiene una coloración
amarilloverdosa, y en la sección transversa se le
CIRROSIS BILIAR encuentra duro y granuloso.
Las alteraciones histológicas de la CBP pasan
por cuatro fases:
Concepto
Fase I. Hay destrucción de los conductos biliares
La cirrosis biliar es una enfermedad hepática crónica, interlobulares y septales por la inflamación granu-
progresiva, que se origina por la lesión u obstruc- lomatosa, con un infiltrado inflamatorio denso del
ción del sistema biliar intrahepático o extrahepáti- fascículo portal por linfocitos, macrófagos, mono-
co, lo que provoca una alteración en la excreción de nucleares y en ocasiones eosinófilos; fibrosis ligera
la bilis, con destrucción del parénquima hepático y
y a veces estasis biliar. Esta fase se conoce con el
fibrosis. En la cirrosis biliar primaria (CBP) hay,
nombre de colangitis destructiva no supurativa cró-
además, inflamación y fibrosis de los conductos
nica.
biliares intrahepáticos. La cirrosis biliar secundaria
Fase II. Se produce una proliferación de los con-
(CBS) se produce por la obstrucción mantenida de
ductillos biliares de menor calibre proximal a la
los conductos biliares extrahepáticos.
obs- trucción del flujo biliar intrahepático,
Cirrosis biliar primaria disminuye el número de conductos biliares y se
Etiopatogenia observa menos infiltrado inflamatorio.
Fase III. Se reducen los conductos interlobulilla-
La CBP es una enfermedad posiblemente autoin-
res, con destrucción de los hepatocitos y una
munitaria, de causa desconocida, asociada con fre-
fibrosis septal que progresa. A veces hay
cuencia a entidades nosológicas de naturaleza
autoinmune, como el síndrome de CREST (calcino- predominio de la colestasis. Éste es el resultado de
sis, fenómeno de Raynaud, disfunción esofágica, la evolución de la enfermedad en meses y años.
esclerodactilia y telangiectasia), el complejo de ojos Fase IV. Cirrosis. En la CBP hay, en
y boca seca (síndrome de Sjögren), la tiroiditis au- resumen, ausencia de conductos biliares, colestasis
toinmunitaria y la acidosis renal tubular. e infiltra- ción de células mononucleares.
En más del 90 % de los pacientes con CBP, se
han encontrado circulando anticuerpos IgG antimi- Cuadro clínico
tocondriales (AMA). Muy característicos son los an- La enfermedad suele cursar de forma asintomática
ticuerpos contra la deshidrogenasa pirúvica por largos períodos, y diagnosticarse al encontrar
mitocondrial; como autoantígeno fundamental se ha una fosfatasa alcalina aumentada, realizada al estu-
detectado en el 90 % de los casos de CBP, el compo- diar otra situación presentada por el paciente. La
nente 74-kDa E2 de la PDC (complejo de la deshi- ma- yoría tienen al final una insuficiencia
drogenasa de ácido pirúvico mitocondrial), llamado hepática avanzada.
dihidrolipoamida acetiltransferasa. Los anticuerpos Hay un predominio en las mujeres de edad me-
inhiben la actividad enzimática del PDC. Se ha ha- diana, con edad de inicio que oscila entre 20 y
llado en el 90 % de los enfermos, además, elevadas 80 años, con una incidencia máxima entre los 40 y
concentraciones séricas de crioproteínas, las que 50. La relación de mujeres a hombres es de 10:1.
contienen inmunocomplejos que pueden activar la Inicialmente los enfermos se quejan de astenia y
vía alternativa del complemento. Todo esto va a fa- de un prurito generalizado o localizado a las
vor de una etiología autoinmunitaria de la CBP, con palmas de las manos y las plantas de los pies.
destrucción de las células epiteliales de los conduc-
Luego de va- rios meses o años aparecen la
tos biliares intrahepáticos mediada por linfocitos,
ictericia y una melanosis, que es el
oscurecimiento de las zonas de la piel que están
expuestas. Se presentan esteatorrea
228
y malabsorción de las vitaminas liposolubles A, D, Colesterol sérico. Se encuentra aumentado.
E o K (traducen la alteración de la excreción biliar), Lipoproteína X. Es una lipoproteína anormal que
que se manifiesta por ceguera nocturna a veces, se ve en las colestasis. Está presente.
dolor óseo secundario a osteomalacia con osteopo- Datos del laboratorio indicativos de esteatorrea
rosis, dermatitis y presencia de equimosis, respecti- y de trastorno de la absorción de las vitaminas
vamente. A causa del aumento mantenido de los liposolubles (ver el “Síndrome de malabsorción in-
lípidos séricos, se produce un depósito de grasa al-
testinal”).
rededor de los ojos (xantelasma), y sobre las articu-
laciones y los huesos (xantomas). Determinación de cobre en el hígado. Está au-
El prurito, la ictericia y la melanosis van en au- mentado, lo que es propio de las colestasis prolon-
mento al decursar los meses y años. Al término gadas.
de 10 o más años, el enfermo presenta los signos de Tiempo de protrombina. Hay hipoprotrombinemia
insuficiencia hepática y de hipertensión portal con (en la fase final).
sus consecuencias, y se desarrolla además la ascitis. Biopsia hepática. Define el diagnóstico.
El examen físico al inicio es normal, después se
comprueba la ictericia, de variable intensidad; la Diagnóstico
melanosis, el xantelasma y los xantomas; hepato- Se debe pensar en CBP ante una paciente de media-
megalia de tamaño moderado y esplenomegalia; na edad, que presente un intenso prurito para el
dolor óseo a la presión, equimosis, dermatitis y cual no se tiene una explicación, o se le detecten
cifras altas de fosfatasa alcalina, o se le encuentre
glositis, así como las manifestaciones de las enfer-
medades autoinmunes que pueden estar acompañan- ictericia con astenia y otras manifestaciones que
do a esta afección. denuncien un trastorno en la excreción biliar, con
una determi- nación de AMA positiva; puesto que
Exámenes complementarios existen falsos positivos, es imprescindible la
Fase inicial realización de la biop- sia hepática para confirmar el
Fosfatasa alcalina. Está aumentada de 2 a 5 veces. diagnóstico. Si la biop- sia es típica y el AMA es
5´- nucleotidasa. Está elevada. negativo, nos auxiliamos de otros estudios
Bilirrubina sérica. Es normal. inmunológicos, como la determi- nación de
Aminotransferasas. Son normales. anticuerpos antinucleares o antimúsculo liso. Hay
Determinación de anticuerpos antimitocondria- enfermos a los que se les deben realizar estudios
les (AMA). Es positiva (título >1:40). Ésta es una de las vías biliares para descartar una obs- trucción
prueba considerada relativamente específica y sen- biliar extrahepática que tenga solución, como es
sible. el caso de la colelitiasis.
Inmunoglobulinas. Hay aumento de la IgM.
Factor reumatoideo. Es positivo en un 70 % de Evolución y pronóstico
los casos. La evolución del paciente con una CBP es diversa;
Anticuerpos antimúsculo liso (SMA). Son positi- en ocasiones permanecen asintomáticos por espacio
vos en el 65 % de los casos. de 10 años o más, y otras veces fallecen en el
Determinación de anticuerpos tiroideos específicos término de 5 a 10 años de habérseles presentado la
o antinucleares. Los resultados están en dependen- enferme- dad por una insuficiencia hepática, que
cia de los procesos autoinmunitarios acompañantes. en ocasio- nes se produce por un SDA grave
por várices esofágicas o por infecciones.
Fase más avanzada de la enfermedad Se señala que la supervivencia puede ser mayor
Bilirrubina sérica. Aumenta progresivamente y lle- en los enfermos asintomáticos, de ahí la importan-
ga a 510 mol/L (30 mg/dl) o más en la fase final. cia del tratamiento para demorar la aparición de la
Aminotransferasas. No van más allá de 150 a 200 etapa final.
unidades (2,5 a 3,3 kat) Los indicadores humorales sirven para precisar
Lípidos totales. Están elevados. la fase en que se encuentra el paciente y programar
el trasplante hepático en el momento adecuado.
229
Tratamiento Cirrosis biliar secundaria
Tratamiento específico
Ácido ursodesoxicólico (Ursodiol). Es un ácido bi- Etiología
liar hidrofílico, que en dosis de 13 a 15 mg/kg/día
produce una mejoría sintomática y de los marcado- La CBS se produce por la obstrucción mantenida,
de forma parcial o total, del conducto hepatocolé-
res bioquímicos séricos en estos enfermos. No se le
doco o de sus ramas principales.
conoce ningún efecto antifibrótico.
Causas en el adulto:
Colchicina. En dosis de 0,6 mg por vía oral 2 ve-
1. Estenosis posoperatoria.
ces al día. Se puede probar en los pacientes sinto- 2. Cálculos biliares, las más de las veces con
máticos que la toleren, ya que se ha visto que colangitis infecciosa.
enlentece la progresión de la enfermedad. 3. Pancreatitis crónica (provoca estenosis biliar y
Metotrexate y ciclosporina. En dosis bajas pare- cirrosis secundaria).
ce tener un efecto en la CBP, al detener o cambiar el 4. Pericolangitis o colangitis esclerosante pri-
curso de la enfermedad, pero dado que no hay sufi- maria.
cientes publicaciones de ensayos clínicos al respec- 5. Tumores malignos del colédoco o del páncreas
to, su uso es limitado. (la mayoría de los casos mueren antes de lle-
Trasplante hepático ortotópico. Es el tratamiento gar a tener una CBS).
de elección en la CBP avanzada. Cuando se realiza
en el momento adecuado utilizando un modelo pro- Causas en el niño:
nóstico validado, se observa un aumento en la su- 1. Atresia biliar congénita.
pervivencia. 2. Fibrosis quística.
3. Quistes del colédoco (raros).
Tratamiento sintomático
Colestiramina. Es una resina que produce secuestro
Patogenia
de las sales biliares. Se indica en dosis de 8 a 12 g/día La obstrucción mantenida del árbol biliar extrahe-
para disminuir el prurito y la hipercolesterolemia. pático provoca un marcado daño al hígado.
Para controlar el prurito intratable se han utilizado Después de 3 a 12 meses de una obstrucción
biliar, la bilis que sale de los conductos biliares
los antagonistas de los opiáceos, la plasmaféresis, e
interlobulillares rotos se almacena en las zonas de
incluso se señala la realización del trasplante hepá-
necrosis periportal y se forman los “lagos biliares”,
tico ortotópico. en cuyo alrededor se colocan las células
Dieta pobre en grasa. Se sustituyen los triglicéri- seudoxantomatosas, que son ricas en colesterol.
dos de cadena larga por triglicéridos de cadena me- Además, la inflamación que se produce por la
dia para disminuir la esteatorrea. obstrucción biliar es la que comienza la
Vitaminas liposolubles A y K. Se administran por fibrogénesis periportal, que a medida que progre-
vía parenteral y con intervalos regulares para evitar sa forma cicatrices y nódulos. El parénquima resi-
o resolver la ceguera nocturna y la hipoprotrombi- dual se regenera. Todo esto lleva a una cirrosis
nemia, respectivamente. finamente nodular, la CBS. Cuando la obstrucción
Suplementos de zinc. Se utilizan en caso que la se suprime, ocurre una mejoría bioquímica e histo-
ceguera nocturna no responda a la vitamina A. lógica.
Calcio con vitamina D. Por vía oral, para mejo-
rar la osteomalacia y la osteoporosis. Cuando la en-
Anatomía patológica
fermedad ha avanzado, se recomienda dar 25(OH)D3 La obstrucción de las vías biliares extrahepáticas
y no vitamina D, ya que el daño hepático existente de forma permanente, produce una estasis biliar
disminuirá la transformación de la vitamina D en con necrosis centrolobulillar y después periportal;
sus metabolitos activos. los conductos y conductillos biliares proliferan y se
di- latan; tiene lugar una colangitis, estéril o
infectada
(se observa en la obstrucción biliar subtotal, provo-
cada por los microrganismos entéricos, como
230
coliformes y enterococos), con infiltrado inflamato- Biopsia hepática. Pone de manifiesto la presen-
rio por polimorfonucleares alrededor de los conduc- cia de la cirrosis.
tos biliares; luego el edema y la fibrosis causan una
dilatación de los espacios porta. Diagnóstico
Cuadro clínico Se debe plantear la CBS en el paciente que
El cuadro clínico es igual al de la CBP. Lo más so- presente un cuadro clínico y de laboratorio que
bresaliente es el prurito y la ictericia. Estos enfermos indique una obstrucción del flujo biliar, sobre todo
presentan fiebre, dolor en el hipocondrio derecho, o si hay el an- tecedente de una intervención
ambos, como expresión de una colangitis o un cóli- quirúrgica previa o de litiasis del árbol biliar,
co biliar. La hipertensión portal solamente ocurre dolor en el hipocondrio derecho o cuadro de
en los casos de larga evolución. colangitis ascendente. Tratamiento

Exámenes complementarios 1. Descompresión quirúrgica o endoscópica del


árbol biliar. Es lo fundamental para resolver la
Fosfatasa alcalina. Está aumentada en 4 a 5 veces
obstrucción del flujo biliar, aun teniendo ya el
lo normal.
enfermo la cirrosis.
Gamma glutamiltranspeptidasa. Está elevada.
5´-nucleotidasa. Se encuentra aumentada. 2. Antibióticos. En aquellos pacientes en los cua-
Bilirrubina total y conjugada. Están elevadas. les no puede solucionarse la obstrucción,
Aminotransferasas. Están elevadas. como sucede en la colangitis esclerosante, se
Hemograma. Hay una leucocitosis. indica un ciclo para tratar la infección que
Lípidos séricos. Están elevados. se haya instalado, o también se usan de forma
Lipoproteína X. Presente. profilác- tica para evitar los cuadros de
Anticuerpos antimitocondriales. Son negativos. colangitis ascen- dente recurrentes.
Datos del laboratorio indicativos de esteatorrea 3. El tratamiento sintomático es igual al de la CBP.
y de trastorno en la absorción de las 4. Trasplante hepático. Se obtienen buenos resul-
vitaminas liposolubles (ver el capítulo tados en los pacientes con CBS e insuficiencia
“Síndrome de malab- hepática.
sorción intestinal”).
Colangiografía percutánea o endoscópica. En
ocasiones es necesaria para definir la causa de la
enfermedad.
231
23
CÁNCER DEL HÍGADO
Concepto tantes, y en las márgenes del Mediterráneo, de 20
ca- sos por 100 000 habitantes. Las frecuencias más
El cáncer del hígado es una proliferación maligna
al- tas se observan en Taiwan, Mozambique y el
de las células hepáticas que se desarrolla en los he-
sureste de China, donde la tasa anual es de 150 por
patocitos, en los conductos biliares intrahepáticos y
100 000 en el sexo masculino.
en los vasos, y es mixto sólo en raras ocasiones.
Hay un predominio de esta neoplasia entre los
Puede ser primario o secundario (metastásico); este
hombres de 3:1 en las áreas de baja incidencia y
último es el más frecuente.
has- ta de 8:1 en las que ésta es alta, lo que se
Clasificación explica por la mayor prevalencia de la infección
por VHB, el alcoholismo y la enfermedad hepática
Las neoplasias malignas primarias del hígado se cla-
crónica entre los hombres. El CHC es más común
sifican en tres tipos:
en la raza negra en relación con la blanca en la
1. Carcinoma. proporción de 4:1. Se presenta entre la tercera y
a. Carcinoma hepatocelular. quinta décadas de la vida y entre la sexta y séptima,
b. Colangiocarcinoma (a expensas de las célu- según la zona sea de alta o baja incidencia,
las de los conductos biliares). respectivamente.
c. Mixto. El cáncer del hígado en Cuba en el año 1995
2. Sarcoma. ocupó el sexto lugar, con predominio del sexo
a. Angiosarcoma. femenino. Etiología
b. Leiomiosarcoma. 1. Infección crónica por virus de la hepatitis B
c. Otros. (VHB) y virus de la hepatitis C (VHC): estas
3. Teratoma hepatocelular. infecciones crónicas provocan cirrosis, que es un
factor de riesgo importante de CHC (3 % anual);
En este capítulo se expondrá sólo el carcinoma entre el 60 y 90 % de estos tumores aparecen en
hepatocelular (CHC), por ser el más frecuente de pacientes con cirrosis macronodular. En Asia, en
los tumores primarios. las zonas de elevada pre- valencia de CHC y de
infección por VHB, se ha com- probado que la
incidencia de este cáncer es 100 veces más alta en
CÁNCER PRIMARIO enfermos con infección por VHB que en controles
no infectados.
DEL HÍGADO En China, los pacientes con hepatitis B crónica
tienen el riesgo de desarrollar CHC en un 40%. En
Epidemiología Asia, el VHB se obtiene en el momento del naci-
miento por trasmisión perinatal, en tanto que la in-
El CHC primario es uno de los tumores más fre-
fección por VHC se adquiere a través de
cuentes en el mundo. En Norte y Sudamérica, Eu-
transfusiones sanguíneas en la edad adulta. El CHC
ropa del norte y central, y Australia, la tasa de
aparece una o dos décadas antes en aquellos
incidencia anual es de 3 a 7 casos por 100 000 habi-
enfermos que sufren infección por VHB durante
toda la vida, que en los pacientes con hepatitis C
contraída en la edad adulta.

232
En España se ha comprobado que más del 70 % observa en la mayoría de los tumores con
de los enfermos con CHC tienen anticuerpos frente ADN de VHB integrado, y que en las células
al VHC. hepáti- cas infectadas con VHB altera el
2. Hepatopatía crónica: cirrosis de cualquier etio- crecimiento normal mediante la activación de
logía, hepatopatía alcohólica, hemocromatosis, los proton- cogenes de la célula huésped.
tirosinemia hereditaria. 5. Ciertas proteínas del VHB se unen al gen su-
3. Toxinas alimentarias: aflatoxina B1. Este presor de tumor p53 y lo inactivan.
hepatocarcinógeno es producido por Aspergillus
flavus parasiticus, hongo que requiere calor y hu- En el caso de la aflatoxina B1, se considera que
medad para su crecimiento; éste contamina los la microtoxina provoca una mutación específica en
alimentos como el maíz y los cacahuetes “enmohe- el codón 249 del gen supresor de tumores p53. Se
cidos”, almacenados en estas condiciones. debe destacar que la carcinogénesis ocurre cuando
el hígado sea mitóticamente activo, como en el
4. Química: Thorotrast (que antes se empleaba
caso de la hepatitis viral crónica con brotes
para radiografías de las vías biliares); su exposición
recurrentes de lesión y regeneración.
se relaciona con el surgimiento de colangiocarci-
noma.
Anatomía patológica
5. Factores hormonales: esteroides androgénicos,
anticonceptivos orales. Aspecto macroscópico
6. Otras: deficiencia de alfa-1 antitripsina. El CHC se presenta de tres formas distintas:
a) La forma masiva expansiva, masa neoplásica
de gran tamaño, con varios nódulos satélites a
Patogenia
su alrededor.
Estudios realizados al VHB de carcinogénesis a ni- b) La forma nodular, multifocal, presente en 2/3
vel molecular, mostraron que su genoma no contie- de los casos, que tiene múltiples nódulos
ne ninguna secuencia oncógena, y que no existe un neoplásicos diseminados por todo el parénqui-
sitio selectivo de integración del ADN viral en el ma hepático.
genoma del huésped, sólo la mutación o la activa- c) La forma difusa infiltrativa, que siempre se
ción de un protoncogen particular. Se consideran los aso- cia a cirrosis y posee pequeños tumores
siguientes factores en la patogenia del CHC: espar- cidos de manera difusa sobre la
superficie hepática.
1. Repetidos ciclos de muerte y regeneración ce-
lular, como ocurre en la hepatitis crónica. Aspecto microscópico
2. Las mutaciones acumuladas producto de los Se encuentran células con características iguales a
continuos ciclos de división celular, transfor- los hepatocitos normales, pero con cierto grado de
man con el tiempo algunos hepatocitos. Se con- anaplasia o de pleomorfismo. En ocasiones hay una
sidera que la inestabilidad genómica es posible atipia celular, con alteraciones del núcleo y ausen-
en presencia de ADN de VHB integrado, lo que cia de conductos biliares y de células de Kupffer.
produce aberraciones cromosómicas, como Los tumores más anaplásicos pueden ser muy
deleciones, translocación y duplicaciones. indiferenciados.
3. La integración viral precede o acompaña a un En dependencia de cómo estén dispuestos los he-
hecho de transformación, dado que el estudio patocitos tumorales y la presencia de estroma fibro-
molecular de las células tumorales en pacien- so, habrá los tipos trabecular, acinar, esclerosante y
tes con infección VHB señala que cada caso es fibrolaminar. Esta última variedad, que tiene mejor
clonal respecto al patrón de integración del pronóstico, no es frecuente y aparece en un hígado
ADN de VHB. sano; sus células tienen poca atipicidad, con cito-
4. La proteína X, codificada por el genoma VHB, plasma eosinófilo y dispuestas en nidos o cordones
es un elemento regulador, activador transcrip- separados por bandas fibrosas que tienen láminas
cional transactuante de muchos genes, que se finas paralelas de colagéno.
233
Cuadro clínico el 70 al 80 % de los pacientes con CHC se encuen-
El cáncer primario del hígado aparece como un sín- tran niveles de AFP superiores a 500 ug/L. En en-
fermos con una hepatopatía y sin la evidencia de un
drome general con astenia, anorexia y pérdida de
tumor gastrointestinal, la persistencia de niveles al-
peso, o con una hepatomegalia silenciosa, pero en tos de AFP (más de 500 a 1 000 ug/L), sugiere la
la mayoría de los casos existe el antecedente de una presencia de un CHC. Cifras crecientes señalan una
cirrosis hepática que ha tenido una rápida progre- progresión del tumor o recidiva tras la resección
sión de la enfermedad dada por un crecimiento muy qui- rúrgica o tratamiento como la
doloroso del hígado, con el hallazgo a la palpación quimioterapia o quimioembolización.
de nodulaciones o un gran nódulo solitario, de pre- Descarboxiprotrombina. Es un tipo anormal de
ferencia en el lóbulo derecho. Puede haber un roce o protrombina y su sensibilidad es parecida a la AFP.
soplo a nivel del hígado, y a veces se encuentran en Imagenología. Tiene utilidad en la detección de
la piel huellas de rascado como expresión del pru- los tumores hepáticos.
rito que en ocasiones acompaña a la afección, aun Radiografía de tórax AP. Se puede encontrar
antes de evidenciarse la ictericia, que por demás es ele- vación del hemidiafragma derecho, derrame
rara, a menos que exista en el enfermo un rápido pleural y metástasis pulmonares.
deterioro de la función hepática o una obstrucción Ecografía hepática. Tiene una sensibilidad supe-
mecánica de las vías biliares. Ocasionalmente hay rior al 90 % de diagnóstico y es capaz de descubrir
ascitis, la cual puede ser sanguinolenta la mayoría de los tumores de más de 3 cm. Se debe
(hemoperitoneo) y deberse a ruptura del tumor. Casi realizar cada 4 o 6 meses a las poblaciones de alto
siempre este líquido ascítico es negativo de células riesgo para detección selectiva.
neoplásicas; en un 20 % de los casos hay fiebre de- TAC hepática. Descubre el 94 % de los tumores
bida a la necrosis del tumor. y hasta el 80 % de las imágenes menores de 1 cm
cuando se realiza con contraste EV. Permite
Manifestaciones paraneoplásicas determinar la permeabilidad de la vena porta o de
Se ven en un pequeño porcentaje de pacientes con la cava inferior. Otros estudios. RMN, gammagrafía
CHC. Ellas son poliglobulia, que se debe a una sus- con Tc-99 m y la angiografía de la arteria hepática,
tancia análoga a la eritropoyetina producida por el imprescindi-
tumor; hipercalcemia, por la secreción de una hor- ble antes de la cirugía.
mona parecida a la paratiroidea, y entre otras Biopsia hepática percutánea. Resulta diagnósti-
manifestaciones paraneoplásicas están hipercoles- ca si se toma la muestra de una zona localizada por
terolemia, hipoglicemia, porfiria adquirida y disfi- la ecografía o TAC. Este proceder debe realizarse
brinogenemia. con cuidado, dado que estos tumores son muy
vascularizados.
Exámenes complementarios Laparoscopia o minilaparotomía. Se indica oca-
Hemograma. Es frecuente la anemia y a veces hay sionalmente para realizar la biopsia hepática bajo
leucocitosis. visión directa, y además detectar un tumor hepático
Bilirrubina plasmática. Por lo general no está muy localizado resecable.
elevada.
Transaminasas. En dependencia del daño hepáti- Diagnóstico
co, estarán normales o aumentadas. Diagnóstico positivo
Fosfatasa alcalina. En ocasiones está elevada. Debe plantearse el diagnóstico de CHC ante todo
Alfafetoproteína (AFP). Es la única globulina que paciente con cirrosis hepática que empeora y “que-
se sintetiza por las células embrionarias en el ma las etapas”, presenta fiebre inexplicable, se que-
híga- do, y constituye un índice de mal ja de dolor en el hipocondrio derecho, y en el cual
pronóstico, pero carece de especificidad, ya que se encuentra al examen físico uno o varios nódulos
se encuentra eleva- da en la cirrosis hepática, sobre la superficie del hígado, que han crecido con
necrosis hepática masiva, hepatitis crónica y gran rapidez. La biopsia hepática confirmará el
embarazo normal, entre otros. En diag- nóstico.
234
Diagnóstico diferencial enfermos, pero no ha habido cambios en la supervi-
Carcinoma metastásico. Es multinodular, de consis- vencia.
tencia pétrea y el íctero es poco frecuente. Otros enfoques terapéuticos son:
Absceso hepático amebiano. Hay antecedentes de
disentería, diarreas crónicas y fiebre, lo que ayuda a 1. Inyección intratumoral de alcohol etílico, cuan-
establecer el diagnóstico. do el tumor es único e inferior a 4 cm, con lo
Peritonitis espontánea. Es necesario descartarla que se logra la necrosis completa de la lesión.
en el paciente cirrótico con ascitis, a través del estu- Esta técnica es poco agresiva y la sobrevida es
dio del líquido ascítico, laparoscopia, etc. igual a la obtenida por resección quirúrgica.
2. Embolización de la arteria hepática con qui-
Pronóstico
mioterápicos (quimioembolización) para que se
Depende del estadio evolutivo en que se diagnosti- produzca la necrosis parcial del tumor y lograr
que el tumor. La muerte ocurre entre 4 y 6 meses a así una mejor sobrevida.
partir del diagnóstico por: 3. Crioablación dirigida por ecografía.
1. Caquexia profunda. 4. Inmunoterapia con anticuerpos monoclona-
2. Sangramiento de várices esofágicas. les marcados con agentes citotóxicos.
3. Insuficiencia hepática con coma.
4. Ruptura del tumor con hemorragia mortal.
CÁNCER SECUNDARIO
La única esperanza es la resección quirúrgica, pero
el tumor puede recurrir, incluso después de la extir- DEL HÍGADO
pación completa (trasplante).
Cuando el CHC se diagnostica de forma precoz Las metástasis hepáticas son frecuentes y su inci-
por determinaciones repetidas de AFP y ecografía, dencia es 20 veces superior a la del carcinoma pri-
es posible una supervivencia de 1 a 2 años, con pro- mario.
babilidad de resección quirúrgica.
Patogenia
Tratamiento
Muchos factores contribuyen para hacer del hígado
La profilaxis consiste en vacunar contra la hepa-
un órgano vulnerable a la infiltración por células
titis B, con lo que se evita la infección y sus secue-
tumorales: su tamaño, su elevada tasa de flujo san-
las. El tratamiento de elección del CHC es la
resección quirúrgica, pues en el caso de tumores de guíneo, su doble sistema de irrigación a través de la
pequeño tamaño que no han producido metástasis arteria hepática y de la porta, la función de filtra-
ni invasión vascular, puede ofrecer hasta un 50 % ción de las células de Kupffer, entre otros. Casi to-
de supervivencia a los 5 años, pero con una elevada das las neoplasias producen metástasis en el
tasa de recidivas. Este proceder es posible en menos hígado, excepto las de los tumores primarios del
del 20 % de los pacientes. encéfalo; los más frecuentes son los del tubo
En el enfermo con CHC y cirrosis, la cirugía no digestivo (colon, recto, estómago y páncreas),
está contraindicada si la función hepática está con-
pulmón y mama. Cuadro clínico
servada.
El trasplante hepático es otra opción terapéutica, Está constituido por los síntomas del tumor prima-
aunque es curativo sólo en una minoría de pacien- rio junto con los inespecíficos de la toma hepática,
tes; además, su utilidad se ha visto limitada por la tales como: pérdida de peso, fiebre y anorexia.
recidiva del tumor o por las metástasis tras el tras- Rara vez el paciente tiene dolor abdominal,
plante. hepatomega- lia o ascitis al incio, que expresan
La adriamicina aislada o combinada con otros fár- enfermedad hepá- tica activa.
macos produce respuesta hasta en el 50 % de los Cuando aparece la hepatomegalia, es dura, pétrea,
de dimensiones variables, a menudo voluminosa
con
235
superficie irregular, a veces dolorosa. El íctero, es Tratamiento
menos frecuente que en el cáncer primario.
El tratamiento de los pacientes con metástasis
En los exámenes complementarios se encuentra hepá- tica depende de la neoplasia primaria y el
un aumento de la fosfatasa alcalina sérica, hipoal- estadio del tumor. En aquellos con metástasis
buminemia, anemia y en ocasiones elevación ligera única, la re- sección quirúrgica puede estar
de las transaminasas y niveles altos del antígeno indicada luego de la extirpación del tumor
carcinoembrionario. El diagnóstico se confirma con primario, con una superviven- cia mayor.
la biopsia hepática dirigida mediante ecografía o El tratamiento paliativo, al igual que en el cáncer
TAC, o durante una laparoscopia. primario, no modifica el pronóstico.
236
24
ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA
Concepto procedentes del intestino, y se provoque un tras-
torno metabólico del SNC y del neuromuscular.
La encefalopatía hepática (EH), también llamada
Entre los factores determinantes en la patogenia de
coma hepático o encefalopatía portosistémica, es un
la EH, se encuentran implicadas varias sustan- cias,
síndrome neuropsiquiátrico reversible en ocasiones,
entre ellas el amoníaco, cuya toxicidad cere- bral se
que se caracteriza por alteraciones de la conciencia,
conoce muy bien. Las fuentes principales de
con discretos trastornos iniciales de la conducta,
amoníaco en el organismo son el colon y los túbulos
cambios de la personalidad, confusión y estupor,
renales. En el colon, el amoníaco se produce como
signos neurológicos fluctuantes, con una caracterís-
resultado de la acción bacteriana sobre diversas ma-
tica frecuente: el temblor aleteante, que se presenta
terias nitrogenadas. La urea, el sustrato nitrogenado
en los pacientes, bien con una hepatopatía grave
más importante, difunde del suero al tubo gastroin-
aguda o crónica con insuficiencia hepatocelular o
testinal, y en el colon es degradada hasta amoníaco y
con cortocircuitos portosistémicos extensos, o am-
luego reabsorbida en la circulación enterohepáti- ca.
bos, y que puede llegar al coma profundo y a la
En el túbulo renal de los individuos sanos se pro-
muerte.
duce amoníaco a expensas de la desaminación de la
Etiopatogenia glutamina y otros aminoácidos.
Se señala también la producción de amoníaco en
Esta afección ocurre de forma aguda con mayor fre-
los músculos por contracción de éstos, así como en
cuencia en la cirrosis, y le sigue en orden la llamada
el estómago, por hidrólisis de la urea bajo la acción
necrosis hepática masiva, por hepatitis viral, tóxi-
de las ureasas gástricas. En las personas sanas el hí-
ca, medicamentosa o por invasión tumoral masiva
gado fija gran parte del amoníaco y lo convierte en
primitiva o metastásica; o de forma crónica y pro-
urea en el ciclo de Krebs.
gresiva, denominada encefalopatía portal sistémica,
Cuando el hígado está dañado, ocurre un aumen-
que aparece en pacientes con anastomosis portosis-
to de la tasa de amoníaco (hiperamoniemia), lo que
témicas espontáneas o quirúrgicas importantes, aun-
también depende de la llegada de la sangre portal al
que tengan más o menos conservada su función
sistema venoso y al cerebro sin ser metabolizada
hepática.
por la glándula hepática.
En realidad se desconoce la causa específica de
A favor de la importancia que tiene el amoníaco
la EH, ya que en su producción intervienen varios
en la producción de la EH, se encuentra su eleva-
factores; los más importantes, considerados como
ción en la sangre y en el LCR, así como la
factores predisponentes que pueden actuar solos o
inducción de esta complicación cuando se
interrelacionarse, son la insuficiencia hepatocelular
administran sales amoniacales; sin embargo, en
avanzada (factor prácticamente necesario) y el cor-
contra de este papel de toxina principal se halla la
tocircuito portosistémico intra o extrahepático, que
falta de correlación entre el estado clínico del
hace que la sangre portal se derive hacia el sistema
enfermo y su concentra- ción en la sangre.
cava, sin pasar por el hígado. Todo lo anterior trae
A pesar de los elementos antes mencionados, aún
como resultado que no se destoxiquen en el hígado
permanece oscuro el mecanismo mediante el cual el
las sustancias con potencial tóxico para el cerebro,
amoníaco induce a la EH.

237
Otras sustancias que contribuyen a producirla son cas, así como de úlceras gastroduodenales, condi-
los mercaptanos (consecuencia de la degradación de ciona hemorragias digestivas en el cirrótico; el
la metionina), los ácidos grasos de cadena corta y el amo- níaco y otros productos nitrogenados, que
fenol. resultan de la digestión de la sangre acumulada en
Con frecuencia se encuentran niveles elevados de la luz in- testinal, actúan como agentes nocivos. El
metionina en pacientes con EH y se ha presentado shock que puede derivarse del sangramiento
este síndrome después de su administración oral. coadyuva a la EH. Igualmente, el exceso de
Las aminas biógenas betahidroxiladas constitu- proteínas en la dieta acele- ra la encefalopatía, al
yen elementos tóxicos. En la EH se hallan aumenta- elevarse la producción de sus- tancias nitrogenadas
dos en el plasma los aminoácidos aromáticos (en por las bacterias del colon. El desequilibrio
especial fenilalanina y tirosina), con una disminu- electrolítico y metabólico, sobre todo la alcalosis
ción de los aminoácidos de cadena ramificada. Este hipocaliémica provocada por las para- centesis
desequilibrio provoca una alteración en el metabo- amplias y repetidas, las diarreas profusas, los
lismo intracerebral de la tirosina (por un incremento vómitos, así como el uso exagerado de diuréti-
en el consumo de la enzima tirosina-hidroxilasa), lo cos, llevan a la encefalopatía hepática. La alcalosis
que hace que no se produzca su secuencia normal sistémica origina una elevación de la proporción
del amoníaco no ionizado (NH3) en relación con
los
+
); es el amoníaco no ioniza-
iones de amonio (NH4
(tirosina-dopa-dopamina-noradrenalina), para lo cual do el que atraviesa la barrera hematoencefálica y
se necesita de aquella enzima, y se desvía para la permanece en el SNC. La hipocaliemia con agota-
síntesis de tiramina y octopamina. El aumento en el miento del potasio intracelular causa la entrada de
plasma de esta última sustancia se relaciona bien con los hidrogeniones en la célula, con disminución del
el grado de la encefalopatía, y es considerada como pH intracelular y aumento de la permeablidad de
un falso neurotrasmisor que actúa sobre las termi- éstas al amoníaco. La hipocaliemia, además, es un
naciones nerviosas presinápticas en el SNC y en el estímulo para que el riñón produzca amoníaco.
periférico desplazando a los trasmisores normales Otros factores desencadenantes son la hipoxia; el
dopamina y noradrenalina, por lo cual tiene lugar empleo de sedantes en general, especialmente los
una respuesta postsináptica inadecuada. barbitúricos o benzodiazepinas; las infecciones
Se ha encontrado un aumento del ácido gamma- agu- das; las intervenciones quirúrgicas, que
aminobutírico (GABA), el cual es un neurotrasmisor implican uso de sedantes, anestésicos e hipnóticos;
inhibidor que se origina en el intestino y que inter- pérdida de san- gre, agua y electrólitos;
viene en la alteración de la conciencia que se ve en traumatismo quirúrgico e hipoxia.
la EH. Se señala que pudiese contribuir a la patoge-
nia de este síndrome un incremento de la permeabi- FACTORES DESENCADENANTES
lidad de la barrera hematoencefálica para algunas DE LA ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA
de estas sustancias mencionadas hasta aquí. Ade- Exceso del aporte de nitrógeno
más, se plantea que las benzodiazepinas endógenas Hemorragia digestiva
contribuyen al surgimiento de la EH. Se debe seña- Dietas hiperproteicas
lar que los receptores de las benzodiazepinas y del Hiperazoemia
Estreñimiento
GABA están relacionados, y que el primero puede
Desequilibrio electrolítico y metabólico
ayudar a la neurotrasmisión dependiente del segun- Hipocaliemia
do. Por último, cualquiera que sea el tóxico, causará Alcalosis
desajustes en el metabolismo energético cerebral, en Hipoxia
Hiponatremia
la neurotrasmisión normal y en la membrana neuro-
Fármacos
nal probablemente por medio de una inhibición de Sedantes, tranquilizantes, opiáceos
la actividad Na+ K+ ATPasa. Diuréticos (véase “Desequilibrio electrolítico”)
Los factores desencadenantes de la EH son di- Otros
Infecciones
versos y cualquier situación que cause en el intesti- Intervenciones quirúrgicas
no una elevación de sustancias nitrogenadas, puede Hepatitis viral aguda sobreañadida
considerarse como factor desencadenante. La fre- Enfermedad hepática progresiva
cuente presentación de várices esofágicas y gástri-

238
Anatomía patológica metacarpofalángicas. Estos movimientos, que son
En los pacientes con encefalopatía aguda, debido a más amplios, lentos e irregulares que el temblor de
que es un proceso funcional de inicio, no se encuentran otras causas, se deben a la pérdida transitoria del
tono postural, por lo que no se puede mantener la
lesiones orgánicas cerebrales. En los casos crónicos
actitud (asterixis). Este signo no es patognomónico
y en los agudos recidivantes, se halla una prolifera-
de la encefalopatía hepática, ya que a veces se ob-
ción difusa con agrandamiento de los astrocitos
serva en las encefalopatías anóxica (policitemia,
protoplasmáticos en la sustancia gris del cerebro y
cor pulmonale) y urémica. Es posible encontrar el
cerebelo, el putamen y el núcleo pálido, sin apenas
signo de la rueda dentada, rigidez muscular
lesiones visibles en las neuronas. En las formas cró- aumentada, incoordinación motora con
nicas se suelen encontrar reblandecimientos cere- fenómenos atáxicos, dismetría, disartria y tics.
brales y atrofia con aumento de la profundidad de Hay hiperreflexia osteo- tendinosa. Los
los surcos, con alteraciones de las neuronas. En al- pacientes presentan disgrafia y apraxia de
gunos casos las lesiones se extienden a la médula construcción, las que se ponen en evi- dencia
(encefalomielopatía), con desmielinización de los cuando se les ordena que escriban y dibujen. Al
cordones laterales y destrucción axonal. progresar esta complicación, el panorama an- terior
se transforma y el enfermo presenta una apa- tía
Cuadro clínico franca, estado estuporoso, temblores fibrilares y
Las manifestaciones clínicas de la encefalopatía he- convulsiones. A veces hay inquietud e irritabilidad
pática son diversas y las alteraciones psiquiátricas y y hasta un cuadro de agitación y delirio.
neurológicas que la caracterizan difieren en depen- Estado de coma. El coma hepático es el grado
dencia de la variedad clínica que el cuadro presente. extremo de la EH. Muestra a un enfermo con pérdi-
Encefalopatía aguda. Las alteraciones neuroló- da de la motilidad voluntaria y de la sensibilidad y
gicas pueden ser reversibles si se resuelven los fac- conciencia, con respiración arrítmica de tipo Kuss-
tores desencadenantes detectados o mejora la maul o de Cheyne-Stokes y, por último, en apnea,
insuficiencia hepática. Esta variedad clínica se ve hipotenso, taquicárdico, febril e ictérico (no siem-
en el paciente con una necrosis hepática masiva, o pre). El examen neurológico evidencia hipotonía
más frecuentemente en la cirrosis hepática en forma muscular, el flapping tremor desaparece, hay
de brotes agudos. De manera inicial se encuentran midriasis pupilar, arreflexia osteotendinosa con sig-
alteraciones de la psiquis del enfermo, sobre todo no de Babinski y abolición del reflejo corneal. En
en lo que respecta a su conducta, pues aparecen tras- ocasiones el coma hepático es tranquilo y semeja
tornos de la personalidad, actos antisociales, cam- un sueño fisiológico.
bios bruscos del humor, trastornos de la inteligencia En el 50 % de los pacientes con enfermedad he-
y la memoria, y pérdida de la capacidad de concen- pática grave, se presenta un aliento peculiar llama-
tración, así como desorientación temporoespacial y do fetor hepático; es un olor típico, a moho o a
trastornos del sueño con inversión de su ritmo. En lugar cerrado y húmedo, debido a la
ocasiones el cuadro psiquiátrico se manifiesta como eliminación de mercaptanos.
una esquizofrenia paranoica, hipomaníaco, con alu- Encefalopatía crónica. Las manifestaciones neu-
cinaciones o megalomaníaco. ropsiquiátricas de esta entidad se presentan de for-
Entre los signos neurológicos tienen importancia ma lenta y progresiva, con exacerbaciones
los temblores fibrilares, donde se destaca el movi- típicamente psiquiátricas y una evolución crónica;
miento en forma de aleteo (flapping tremor), con- la mayoría de estos pacientes son manejados por
sistente en un temblor de las manos, la lengua, los psi- quiatras durante largo tiempo, hasta que se
labios y los párpados, que se acentúa con los movi- diagnos- tica la enfermedad hepática. En ellos se
mientos intencionales y se alivia con el reposo, y presentan cuadros neurológicos orgánicos
que se observa mejor cuando se le indica al enfermo irreversibles, dados por paraparesia espástica sin
extender los brazos y colocar las manos en flexión afección sensitiva, por desmielinización de los
dorsal con los dedos abiertos por unos minutos; apa- cordones laterales de la médula, síndrome de
rece así una serie de rápidos movimientos de flexión Parkinson sintomático por afec- tación de los
y extensión en las articulaciones de la muñeca y ganglios basales y otros. Ocurren en enfermos que
tienen anastomosis portosistémicas
239
espontáneas o quirúrgicas con relativa conservación Amoniemia y aminoacidemia. Puede detectarse un
de la función hepática. incremento, tanto del amoníaco, que no siempre se
Para tener una visión real de la evolución de la corresponde con el grado de encefalopatía (amonie-
EH, así como de la respuesta al tratamiento, funda- mia normal de 20 a 80 mg/dl), como de los
mentalmente de la forma aguda, es importante cla- aminoá- cidos en la sangre.
sificar ésta por grados o estadios, desde la etapa Electrolitemia. Con frecuencia existe hiponatremia,
subclínica hasta el coma, de acuerdo con la clínica y hipocloremia e hipocaliemia. No son raras la hipo-
la electroencefalografía. calcemia, hipofosfatemia e hipomagnesemia. Por
supuesto, en la fase de insuficiencia renal estos últimos
CLASIFICACIÓN POR GRADOS electrólitos plasmáticos aumentan. Estas
determina-
DE LA ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA
ciones ponen al descubierto algunos de los factores
Grado Estado mental Signos neurológicos EEG desencadenantes de la encefalopatía hepática.
Equilibrio acidobásico. Suele observarse una al-
Subclínico Normal. Alteración Normal. calosis respiratoria por hiperventilación o una alca-
de las pruebas losis metabólica por hipocaliemia. Lo más
psicométricas.
I Inversión del Temblor, apraxia, Anormal.
frecuente es encontrar un trastorno mixto del
patrón del sueño, incoordinación, equilibrio acido- básico.
euforia o asterixis. Electroencefalograma. Tiene gran valor para el
depresión, ligera diagnóstico. Sus alteraciones son tempranas y
confusión.
cons- tantes, comunes a todas las encefalopatías
II Letargo, Asterixis,disartria, Anormal.
somnolencia, reflejos primitivos. metabó- licas Se registran ondas deltas lentas en
desorientación, serie de 2 o 3/s, recogidas sobre todo en las áreas
conducta frontales. Es característica la presencia de ondas
inapropiada. trifásicas.
III Somnoliento, Asterixis, Anormal.
pero se le puede signo de Babinski, Potenciales evocados auditivos y visuales.
despertar; gran rigidez muscular. Ponen en evidencia la presencia de encefalopatías
confusión, latentes y sirven para evaluar la respuesta al
lenguaje
incoherente.
tratamiento. Diagnóstico
IV Coma. Postura de Anormal. Diagnóstico positivo
descerebración, La EH deberá sospecharse ante todo paciente con
responde a
estímulos
enfermedad hepática aguda o crónica y cortocircui-
dolorosos al inicio tos portosistémicos espontáneos o quirúrgicos, que
y luego no. presente los trastornos del estado mental y los sig-
nos neurológicos antes señalados, con un electroen-
cefalograma característico, aunque no específico,
Exámenes complementarios ya descrito.
Las investigaciones de laboratorio apenas ofrecen
datos específicos. Diagnóstico diferencial
Pruebas de función hepática. Los resultados no El diagnóstico diferencial hay que hacerlo con la
difieren de los que se obtienen en pacientes con he- intoxicación alcohólica aguda, el delirium tremens,
patopatías graves en ausencia de EH. la encefalopatía de Wernicke y la psicosis de Kor-
Urea y glicemia. Teóricamente la urea y la gluco- sakoff, las cuales se relacionan con el alcoholismo,
sa en la sangre estarán disminuidas, puesto que el y su forma de manifestarse recuerda a la EH. Ade-
hígado no podrá transformar los aminoácidos y el más, hay que diferenciarla de la intoxicación por
amoníaco en urea, y tanto los depósitos como la sín- psicofármacos.
tesis de glucógeno estarán afectados. En realidad hay Deben descartarse todos los demás cuadros de
un aumento de ambas, sobre todo de la urea, a causa coma: cerebral, diabético, urémico, etc.
de la oliguria e insuficiencia renal que con frecuen- Es necesario tener en cuenta también el hemato-
cia concomitan con la EH. ma subdural, de frecuente presentación en los

240
cirróticos después de traumatismos ligeros, así como evolución fulminante que se complica con edema
las meningitis y la hipoglicemia. cerebral en sus etapas más avanzadas, debe plan-
tearse en estos pacientes la realización del trasplan-
Evolución y pronóstico te hepático ortotópico, para su mejor pronóstico.
En los pacientes con una encefalopatía aguda, las El tratamiento pretrasplante en los enfermos con
manifestaciones neurológicas son totalmente rever- un fallo hepático agudo y una EH grado III o IV,
sibles cuando se logran eliminar los factores desen- incluye las medidas siguientes:
cadenantes o la función hepática mejora, no así en
1. Ventilación electiva, sedación con fentanyl y
los enfermos con encefalopatía crónica, en los cua-
relajación con atracurium para proteger la vía
les estas manifestaciones son progresivas e irrever-
aérea, manejar mejor el edema cerebral y evi-
sibles.
tar cambios en la presión intracraneal en estre-
El pronóstico es sombrío cuando la EH se pre-
cha relación con la agitación psicomotora.
senta de forma espontánea como complicación final
2. Monitoreo de la presión extradural. Tiene mu-
de una cirrosis, así como en la gran mayoría de los
cho valor en estos pacientes, lo cual no está
casos de hepatitis grave.
exento de riesgo.
Tratamiento 3. Manitol en bolo, repetido a razón de 0,5 g/kg
de peso corporal en un período de 10 min.
Tratamiento profiláctico Éste es el tratamiento farmacológico
Está dirigido a eliminar y tratar los factores desen- fundamental para el edema cerebral en estos
cadenantes: casos.
1. Evitar o controlar la administración de sustancias 4. Acetilcisteína en infusión EV continua en los
nocivas para el hígado, como los sedantes, tran- enfermos con EH de grado IV para mejorar el
quilizantes y analgésicos, que se metabolizan flujo sanguíneo cerebral y el nivel de oxigena-
en dicha glándula, así como diuréticos por ser ción metabólica cerebral.
inductores de hipocaliemia, hipovolemia y al- 5. Monitoreo de la glicemia. Puesto que en estos
calosis. casos la hipoglicemia puede ser una complica-
2. Evitar las paracentesis amplias e innecesarias; ción fatal, debe obtenerse una glicemia cada 4
sólo se realizarán cuando realmente estén indi- horas.
cadas (ver “Cirrosis hepática”).
Todas las medidas experimentales, tales como
3. Corregir de manera constante los trastornos
cor- ticosteroides, L-dopa, prostaglandinas, así
electrolíticos y acidobásicos. La alcalosis au-
como la exanguinotransfusión y la plasmaféresis
menta la concentración de amoníaco no ioni-
se han in- tentado, pero no han reportado grandes
zado, por lo cual este elemento queda disponible
beneficios, por lo que se recomienda limitar su uso
para su desplazamiento al interior de las cé-
a estudios controlados.
lulas.
II. Encefalopatía hepática por anastomosis
4. Prevenir la carga excesiva de nitrógeno tratan-
portosistémica espontánea o quirúrgica. Tiene bue-
do de forma intensa la hemorragia gastrointes-
na respuesta al tratamiento convencional, pero cuan-
tinal y evitando el exceso de proteínas en la
do se hace refractaria se recomienda la embolización
dieta.
transhepática o la ligadura quirúrgica del shunt
5. Suprimir precozmente las infecciones.
portosistémico. Ha sido ocasionalmente exitosa.
6. En caso de intervención quirúrgica imprescin-
III. Encefalopatía hepática por afección hepáti-
dible, utilizar con precaución los anestésicos,
ca crónica (Ej.: cirrosis hepática).
reducir el tiempo operatorio al mínimo y evitar
el shock, el desequilibrio hidroelectrolítico, la
pérdida de sangre y la hipoxia. Grados subclínicos I y II:
1. Vigilancia estrecha del enfermo con estric-
Tratamiento específíco tos cuidados de enfermería.
I. Encefalopatía hepática por insuficiencia hepáti- a) Balance hidromineral.
ca aguda. Debido a que su inicio es rápido, con una b) Peso diario.
c) Examen del estado mental.
241
d) Examen de la escritura. como la lactulosa en el tratamiento de la
e) Investigaciones de factores desencade- encefalopatía hepática, tiene mejor sabor
nantes. y es más tolerable en algunos enfermos.
2. Reducción de la producción y absorción del c) Neomicina en la dosis de 0,5 a 1 g cada
amonio. 6 h. Es un antibiótico no absorbible,
a) Disminución de las proteínas en la dieta. que se utiliza para eliminar la flora
Las proteínas dietéticas se limitan a 20 g proteolítica intestinal, por lo que
al día y se aumenta su aporte de forma disminuye la produc- ción intestinal de
paralela a la mejoría del enfermo, hasta amonio; tiene la desven- taja de su
llegar al límite máximo tolerado (40 g/día). ototoxicidad y nefrotoxicidad. Iguales
Las proteínas cárnicas deben ser restrin- resultados se obtienen con el em- pleo
gidas estrictamente. Los suplementos de del metronidazol, en dosis de 800 mg
proteínas de origen vegetal son más ven- diarios, aunque los trastornos
tajosos que los de origen animal, por su gastrointes- tinales que provoca limitan
alto contenido de fibras dietéticas. su uso por pe-
Al descamarse las células epiteliales del ríodos prolongados. Una alternativa la
intestino se producen proteínas adiciona- constituye el rifaximín, un derivado no
les en su luz, que por la acción de las bac- absorbible de la rifamycina, en la dosis
terias se metabolizan en amonio. Ambos de 1 200 mg diarios.
sustratos amoniogénicos (exógenos de la
dieta y endógenos) son sacados de la luz Grados III y IV:
intestinal por la acción osmótica catártica 1. Vigilancia igual que en los grados anterio-
de los disacáridos no absorbibles, como res, sobre todo de los reflejos osteotendi-
la lactulosa y el lactitol. nosos.
b) Lactulosa y lactitol. La dosis diaria de lac- 2. Suprimir todas las proteínas en la dieta.
tulosa oscila entre 15 y 30 ml 3 veces al 3. Administrar 1 500 a 2 000 calorías diarias
día para que el paciente tenga 2 a 4 depo- por vía EV, en forma de dextrosa al 10 %,
siciones blandas diarias; así se mantiene, sin sobrepasar los 3 000 ml en 24 h.
además, al enfermo laxado. Si la admi- 4. Aportar electrólitos según los requerimien-
nistración oral o nasogástrica no es posi- tos del paciente.
ble, o han tenido lugar sangramientos 5. Lactulosa. En dosis de 30 a 50 ml/h hasta
digestivos, se indican enemas con lactu- que aparezca diarrea, luego se reajusta la
losa con la misma frecuencia. Además de dosis a 15 o 30 ml 3 veces al día. Se utiliza
su efecto laxante osmótico, la lactulosa también en enema. Se puede usar el lactitol
provoca una inhibición de las bacterias en dosis de 1 o 2 sobres de 10 g cada 8 h, y
colónicas que producen ureasa al dismi-
luego 1 o 2 sobres diarios tratando de que el
nuir el pH del colon, pues al actuar sobre
paciente tenga dos deposiciones diarias.Tan
ella la flora sacarolítica se forman ácidos
efectivo como la lactulosa es el aspartato de
orgánicos; se promueve así el crecimien-
ornitina, en dosis de 9 g 3 veces al día y el
to de lactobacilos no productores de
ureasa.Todo esto trae como resultado una benzoato de sodio, 10 g diarios.
formación de amonio reducida a nivel de 6. Neomicina. En dosis de 4 a 6 g diarios, que
la luz del colon, con disminución de su luego se disminuyen.
absorción por difusión no iónica y un 7. L-dopa (precursor de la dopamina) o la
movimiento del amonio desde la sangre bromocriptina (estimulador específíco de los
hacia la luz intestinal. receptores de dopamina). Se utilizan tenien-
El lactitol oral, aunque aún su uso no do en cuenta la posibilidad de que sus meta-
está autorizado, se utiliza a la dosis de 1 bolitos desplacen a los neurotrasmisores
sobre (10 g) 2 veces al día; es tan efectivo falsos en las terminaciones nerviosas y, por
lo tanto, mejoren la trasmisión
sináptica.Los resultados no han sido
eficaces.
242
8. Cetoanálogos de aminoácidos esenciales. Son 10. Flumazenil. Es un antagonista de las benzo-
compuestos exentos de nitrógeno que tienen diazepinas, útil en la EH desencadenada por
la estructura del aminoácido sin un grupo el uso de benzodiazepina.
amino y que brindan la posibilidad teórica 11. Hemodiálisis. No se ha demostrado su
de combinarse con el nitrógeno y disminuir bene- ficio.
el fondo común de éste. Se han utilizado, aun- 12. Trasplante hepático ortotópico. Se indica en
que no se ha demostrado su eficacia clínica. aquellos pacientes con una encefalopatía
9. Aminoácidos ramificados. Se emplean para pro- gresiva que no responden al tratamiento
resolver la desproporción que existe entre los
con- vencional.
aminoácidos aromáticos y los ramificados,
y así interferir en la patogenia de la EH. Fór-
mula F-080 por vía EV.
243
25
COLECISTOPATÍAS
Las funciones de secreción, absorción, concentra- Clasificación
ción, repleción y evacuación del reservorio biliar,
Topográfica
se afectan por una serie de procesos que en ocasio-
1. Disquinesias de la vesícula biliar (coledisqui-
nes se limitan a dicho órgano, pero que con frecuen- nesias).
cia son capaces de sobrepasarlo y extenderse a otras a. Colecistoatonía.
zonas del árbol biliar. Ya se trate del primer caso o b. Vesícula irritable.
del segundo, la expresión clínica estará dada por una 2. Disquinesias del esfínter de Oddi (oddidisqui-
sintomatología profusa, resultante por lo general del nesias).
aumento de la presión a cualquier nivel de la vía a. Hipotónica.
biliar y del impedimento al libre flujo de la bilis. Al b. Hipertónica.
cuadro resultante, que tiene múltiples expresiones
clínicas, se le da el nombre de colecistopatía. Etiológica
Los procesos patológicos capaces de producir 1. Alteraciones funcionales sin lesión orgánica
estas alteraciones son funcionales y orgánicos. Los con que relacionarlas.
primeros serán estudiados bajo el calificativo de dis- 2. Alteraciones funcionales dependientes de una
quinesias biliares, mientras que los segundos com- causa orgánica.
prenderán las sifopatías, las colecistosis y las a. Disquinesias de origen hepatobiliar: hepati-
colecistitis. tis, absceso hepático, colecistitis, litiasis,
colangitis, tumores, odditis, etc.
b. Disquinesias de origen extrabiliar: ulcus
DISQUINESIAS gas- troduodenal, pancreatitis, apendicitis,
pato- logía colónica, trastornos
BILIARES endocrinos, humorales y neurovegetativos.

Fisiopatología
Con este nombre se designan los trastornos de la
motricidad de las vías biliares (espasmos, atonía, La vesícula biliar, reservorio de la bilis hepática,
tie- ne suma importancia en la regulación de la
incoordinación) que tienen lugar en un aparato biliar
presión biliar.
libre de lesiones orgánicas evidentes (malformacio-
La llegada de la bilis al duodeno es un hecho fi-
nes, colesterosis, litiasis, inflamación manifiesta).
siológico complejo que se inicia por la concentra-
Este capítulo resulta en la actualidad apasionante y
ción vesicular, la cual pone la bilis bajo tensión; sin
debatido, puesto que si bien es cierto que las cole- embargo, ésta sólo alcanzará el duodeno si la región
cistopatías puramente funcionales existen, su núme- infundibulocervicocística (sifón vesicular) se abre y
ro se reduce cada día más, porque las modernas la fuerte musculatura del esfínter de Oddi se relaja.
técnicas de diagnóstico permiten el reconocimiento Por otra parte, la repleción vesicular sólo se logra si
de una serie de factores orgánicos que hasta hace el tono del esfínter de Oddi es algo superior (1 o 2
poco resultaban de diagnóstico difícil, por no decir cm de agua) al sifón vesicular. Para que este
imposible. sincronis- mo vesicosifooddiano se realice, es
necesario que

244
los factores humorales colecistoquinina-anticole- una lucha hacia objetivos irreales. Su sintomatolo-
cistoquinina y neuromusculares, que comandan la gía digestiva se caracteriza por dolor de tipo cólico
contracción y relajación de las vías biliares extrahe- en el hipocondrio derecho, con irradiación o no a la
páticas, estén intactos y funcionen con una coordi- espalda y al hombro de ese lado, relacionado gene-
nación perfecta, pues la pérdida de ésta ocasiona la ralmente con la ingestión de algún alimento, y
afección que estudiamos. acom- pañado de náuseas y vómitos.
La migraña resulta un síntoma en extremo fre-
Cuadro clínico cuente en este tipo de disquinesia.
Las vías biliares tienen un número limitado de for- Estos enfermos presentan a veces hiperclorhidria
mas de expresar su disfunción; es decir, que los sín- y ulcus gastroduodenal asociado, e incluso se han
tomas y signos que estén presentes no serán visto casos con íctero leve de corta duración (1 a 4
característicos de las disquinesias; por el contrario, días).
serán los mismos de todas las colecistopatías, con
algunas variantes, según el tipo de disquinesia. Diagnóstico
Colecistoatonía. Descrita por Chiray y Pavel en Actualmente se desconoce la frecuencia de las dis-
1925 como una entidad puramente funcional, re- quinesias puras anorgánicas, su importancia pato-
sulta en la actualidad excepcional como tal, dada la génica en la génesis de actividades orgánicas
frecuencia con que las causas orgánicas son detec- evolutivas y las causas que la producen. Se sabe
tadas en su producción. que factores neurovegetativos, endocrinos,
Los pacientes afectados aquejan una sensación humorales y alérgicos, el parasitismo, el psiquismo,
dolorosa en el hipocondrio derecho, dispepsia así como cier- tas afecciones a distancia
hipoesténica, migrañas y presentan tendencia a la intervienen, pero se igno- ra el porqué y cómo.
depresión melancólica. Desde el punto de vista práctico será necesario
Vesícula irritable. Su síntoma fundamental es la esforzarse, ante todo, en descubrir las lesiones
diarrea posprandial precoz, provocada por la inges- orgánicas, ya que por presentar igual sinto-
tión de alimentos colecistoquinéticos: huevos, cho- matología son capaces de simularla. La verdadera
colate, grasas animales, etc. Los enfermos refieren importancia de estas afecciones no reside en su sig-
dolor subcostal derecho en forma de cólicos. nificación como factor patogénico independiente,
Disquinesia hipotónica. Se caracteriza por afec- sino en su diagnóstico diferencial frente a las
tar a pacientes de tipo leptosomicoasténico con agre- altera- ciones orgánicas, fundamentalmente las que
sividad manifiesta, generalmente del sexo femenino, afectan el esfínter de Oddi y las que se
en los cuales son frecuentes la hipoclorhidria, el es- encuentran en las sifopatías.
treñimiento espástico y la colitis mucosa. Desde el El diagnóstico se basará en el estudio
punto de vista biliar, se distingue por presentar sen- imagenoló- gico asociado a pruebas de
sación de pesantez y tensión en el hipocondrio dere- vaciamiento vesicular con la comida grasa o con el
cho, sin un verdadero dolor y con cólicos, puesto empleo de la colecisto- quinina EV.
que no hay hiperpresión en el árbol biliar; suelen En la última década la ecografía ha ganado un
tener dispepsia y en ocasiones colangitis ascenden- sitio de preferencia diagnóstica general, por ser un
te fugaces y de corta duración, acompañadas de bre- método de gran sensibilidad, bajo costo, sin contra-
ves brotes febriles y de escalofríos, todo ello a causa indicaciones, que puede repetirse las veces que sea
del reflujo a través de un esfínter de Oddi hipotónico. necesario sin peligros, pues no se emplean
La migraña también constituye un síntoma fre- radiacio- nes ni necesita de medios de contraste y
cuente, aunque con menor incidencia que en la se efectúa incluso al lado de la cama del paciente,
disquinesia hipertónica, y tiene la característica de de ser nece- sario.
mejorar con el drenaje biliar. En la actualidad, el ultrasonido (US) ocupa el
Disquinesia hipertónica. Al igual que la forma pri- mer lugar en la secuencia imagenológica
anterior, afecta a menudo a pacientes del sexo fe- diagnósti- ca que se debe prescribir para el
menino, que desde el punto de vista psíquico son estudio de las afecciones orgánicas o
portadores de agresividad reprimida y manifiestan funcionales de las vías biliares. Su uso permite
evaluar en las disquinesias el volumen vesicular en
ayunas (normal de 32 a 40 ml),
245
así como después de la comida grasa o de la inyec- Uno de los aspectos más importantes del trata-
ción EV de colecistoquinina, el cual debe reducirse miento es la relación médico-paciente. El primero
normalmente un 50 % a los 15 min y un 75 % a la deberá explicar al enfermo la naturaleza benigna de
hora. sus trastornos y procurará por todos los medios de
Las colecistografías oral y endovenosa, con sus llevar a su ánimo la idea de que lo primordial es un
variantes de tomografía y radiocinegrafía, mostra- régimen higienodietético apropiado, asociado al
rán en la colecistoatonía una vesícula que concentra empleo de algunos medicamentos. Y es que la evo-
mal el colorante, con un poder de evacuación defi- lución y el pronóstico de esta enfermedad está en
ciente después de la comida grasa. estrecha relación con la dieta y las drogas emplea-
En la vesícula irritable, la imagen vesicular per- das, así como con la habilidad que tenga el médico
mitirá ver un vaciamiento rápido, total y temprano para contrarrestar el estado psíquico en que se en-
después de la comida grasa; en ocasiones se observa cuentre el paciente.
su desaparición total, 20 o 30 min después de dicha Las dietas muy estrictas son excelentes en las
ingestión. per- sonas obesas, pero desastrosas frente a las
En la disquinesia hipotónica la vesícula se tiñe delgadas, ya que engendran astenia, mayor
pobremente y tiene buena evacuación después de la adelgazamiento, adinamia y psicastenia. Hay que
comida grasa. evitar en lo posible las grasas animales, pues no se
En los casos con esfínter de Oddi atónico, la vesícu- digieren bien, y se deben suprimir aquellos
la no se observa, y se aprecia cómo el medio de con- alimentos que engendren migraña y crisis de
traste va llegando al duodeno sin que apenas se dolores intensos.
perfile la vía biliar principal. Sólo se logra su visua- En cuanto a los medicamentos, se utilizará, en
lización cuando se asocia la biligrafina con la mor- los casos de vesícula irritable y disquinesia
fina. hipertóni- ca, la atropina, sus derivados y los
En la disquinesia hipertónica la vesícula se vacía anticolinérgicos de síntesis: propantelina
mal y se presenta contraída; la imagen del hepato- (bromuro de propanteli- na, 15mg cada 6 u 8 h);
colédoco persiste 2 o 3 h y a veces más. Aquí se hexociclo (metilsulfato de hexociclo), 25 mg cada
hace necesario el diagnóstico diferencial con las afec- 6h.
ciones orgánicas del esfínter de Oddi y con las
En la disquinesia hipotónica y en la
sifopatías. En el primer caso, la prueba farmacoló-
colecistoato- nía, el sorbitol al 70 % (1 o 2
gica del nitrito de amilo, basada en su acción
relajadora sobre el esfínter, permitirá diferenciar si cucharadas 3 veces al día), el sulfato de magnesio
el obstáculo es funcional u orgánico. En el segundo, al 25 o 33 % (1 cucha- rada en ayunas) y los
el empleo de la colecistoquinina EV resulta de ines- aceites de oliva y maíz son los medicamentos
timable ayuda al mostrar mejoría evidente del va- preferidos, ya que facilitan la libera- ción de
ciamiento en la disquinesia, mientras que este se colecistoquinina endógena y con ello la con-
mantiene deficiente o es casi nulo en las sifopatías. tracción vesicular y la relajación, tanto del sifón
En cuanto al drenaje biliar (prueba de Meltzer- como del esfínter de Oddi. De todos estos medica-
Lyon), resulta de poca ayuda en el diagnóstico de mentos, el sorbitol ofrece los mejores resultados
estos trastornos. Sin embargo, su variante, el drena- por ser no sólo un buen colecinético, sino también
je biliar cronometrado, tiene gran valor para algu- un potente colerético, a la vez que produce la
nos autores. libera- ción de pancreozimina y secretina
pancreática, así como villiquina intestinal. Además,
Tratamiento
tiene la ventaja de bloquear la anticolecistoquinina
En las disquinesias de causa orgánica, el tratamien- y de ser agrada- ble al paladar.
to irá encaminado a eliminar ésta. Es generalmente
En cuanto al drenaje biliar, hay que señalar que
quirúrgico en la variedad hepatobiliar, mientras que
resulta eficaz frente a los pacientes con migraña,
en las funcionales o puras debe ser siempre médico,
sobre todo cuando esta se asocia a la colecistoato-
ya que cuando se ha empleado la cirugía, el cuadro
nía. Los ansiolíticos en general resultan de gran uti-
ha empeorado.
lidad en las disquinesias; el más empleado es el
clorodiazepóxido.
246
SIFOPATÍAS vesícula que no se vacía tras la comida grasa, y que
después de la inyección de colecistoquinina EV
mantiene una evacuación deficiente o nula, a pesar
Este témino, propuesto por Debray, Roux, le Canuet de observarse contraída. Llama la atención, también,
y la Laumonier, de la escuela francesa, engloba la que en la mayoría de los pacientes se identifica un
obstrucción mecánica parcial, incompleta y no estrechamiento o interrupción en la zona del sifón y
calculosa, de la región infundibulocervicocística (si- que el colédoco se visualiza de forma tenue o bien
fón vesicular). no se llega a demostrar su sombra.
El US tiene igualmente gran valor para el diag-
Sinonimia nóstico de esta afección, pues detecta en la etapa de
Síndrome del conducto cístico, enfermedad del cue- vaciamiento vesicular las mismas imágenes que las
llo vesicular, infundibulocisticitis, disquinesia me- descritas con el estudio contrastado.
cánica del cuello vesicular e hipertonía del cuello Una investigación útil para algunos autores, pero
vesicular. cuyo valor niegan otros, es el drenaje biliar
Adoptamos el de sifopatías porque, aparte de ser cronometrado asociado a la colecistoquinina EV.
corto, resulta el único que engloba topográficamente Sus defensores señalan que en las sifopatías, la
toda la zona patológica. bilis B, cuya cuantía se encuentra disminuida,
aparece entre los 6 y 20min después de la
Etiología inyección, mientras que en un individuo normal lo
Aunque a veces se deben a una causa congénita, hace alrededor de los 6min. Para sus detractores,
como el desarrollo anormal de las válvulas del sifón, este método carece de valor, porque según ellos
lo más frecuente es que los factores causantes sean ese tiempo varía de una persona a otra, e incluso
adquiridos: estenosis, fibrosis, bridas, angulaciones, en una misma persona tiene cam- bios de un día a
adherencias, adenomatosis, adenomiomatosis, etc. otro.
La región del sifón preside la repleción y la eva- Si el enfermo es operado, la
cuación de la vesícula biliar, y para que su luz, ya radiomanometría vesicular mostrará que las
bastante estrecha (2 a 3mm), se torne patológica, presiones inicial, de pa- saje y residual se
basta la presencia de cualquiera de los factores men-
encuentran elevadas, mientras que la
cionados. radiomanometría del colédoco es normal.
En contraste con las lesiones indiscutibles, llama
El diagnóstico diferencial hay que establecerlo
la atención que el cuerpo de la vesícula es normal y
con la disquinesia hipertónica, la colecistitis
que sus paredes pueden estar también normales, en-
crónica, la colelitiasis, la colecistoatonía, algunas
grosadas o atróficas, lo cual depende de la etapa evo-
afecciones orgánicas de la zona pancreático-
lutiva en que se haga el estudio histológico.
duodenal y el sín- drome del colon irritable.
Cuadro clínico
Las sifopatías se observan con mayor frecuencia en Tratamiento
pacientes del sexo femenino. El síntoma fundamen- Una vez hecho el diagnóstico, el tratamiento será
tal es el dolor en el hipocondrio derecho, de tipo quirúrgico y deberá realizarse una colecistectomía.
cólico hepático, con su irradiación característica; Se intervendrá sobre la vía biliar principal en los
generalmente se presenta después de la ingestión de casos en que coexista una afección orgánica
alimentos grasos y se debe a la contracción enérgi-
asociada.
ca, pero ineficaz, de la vesícula biliar para evacuarse.
De forma ocasional se palpa una vesícula distendida.
Las migrañas no son raras.
COLECISTOSIS
Diagnóstico
Debe sospecharse el diagnóstico frente a un dolor El médico clínico tiende a considerar sólo como
típico y ante el hallazgo colecistográfico de una afec- ción biliar los estados inflamatorios e
infecciosos, cuyo carácter orgánico se demuestra
por lo general con el descubrimiento de litiasis, y
las disquinesias biliares, cuyo substrato parece ser
funcional y difí- cilmente demostrable.
247
Entre estas dos situaciones extremas existe, sin que semejan una franja dentada, y la imagen en
embargo, una serie de enfermedades, cuyo carácter plie- gues radiados a causa del fruncimiento de la
orgánico es indiscutible y cuya significación pato- mucosa engrosada. Son signos indirectos la
génica es importante. Se trata de las colecistosis, tér- hiperopacifica- ción, la hipertonía y la
mino propuesto por Colesson, y con el cual se hiperevacuación vesicular.
rehabilitan las colecistopatías crónicas, no litiásicas,
no inflamatorias y no tumorales. Hialinocalcinosis
Algunos autores las consideran como formas
Clasificación evolu- tivas de las colesterolosis.
Se consideran cuatro tipos de colecistosis: Vesícula cálcica. Se trata de la transformación
1. Las colesterolosis. del contenido vesicular en una sustancia pastosa
a. Forma difusa (vesícula fresa). rica en sales. Fue descrita por Volkmann en 1908
b. Forma localizada segmentaria (infundibular). bajo el nombre de “bilis en lechada de cal”.
c. Pólipos colesterólicos. El contenido vesicular es blanco calcáreo o del
2. Las hialinocalcinosis. color de la masilla, o bien se halla teñido de pig-
a. Vesícula cálcica. mento biliar. Está compuesto por carbonato de cal-
b. Vesícula de porcelana. cio (97 %), fosfato de calcio (0,17 %), colesterol
3. La diverticulosis intramural. (2,7 %) y bilirrubina (0,033 %).
a. Congénita. Múltiples teorías tratan de explicar este fenóme-
b. Adquirida difusa (colecistitis glandular pro- no. Mc Gall, Tuggle, Cornell y Clarke estiman que
liferante). se trata de una obstrucción del conducto cístico, lo
c. Adquirida localizada (seudoadenomatosis del que implica secundariamente la precipitación del
fondo). carbonato de calcio. River y Richard creen que
4. Las neuromatosis. todo es causa de una hipersecreción de mucus
a. Superficial o mucosa. b. rico en calcio. Para Phemister y Drury, el
Profunda y adventicial. fenómeno se debe a la alcalinización de la bilis.
Desde el punto de vista clínico, la
Cuadro clínico hialinocalcinosis presenta la misma sintomatología
Colesterolosis que las colestero- losis.
Esta forma de colecistosis se caracteriza por la infil- El diagnóstico se hace por medio de un estudio
tración y retención del colesterol y otros materiales simple del hipocondrio derecho, ya que las radio-
lipoides. La primera referencia histórica que apare- grafías contrastadas muestran casi siempre una ve-
ce sobre ella data de 1857 y se debe a Virchow. Pue- sícula excluida.
de ser difusa, localizada y polipoide. La placa radiográfica revela una vesícula
Clínicamente se manifiesta por dolor en el hipo- con densas manchas de calcio, a la que en
condrio derecho de tipo cólico biliar, dispepsia hi- ocasiones se asocian cálculos de colesterina. La
potónica, vómitos y migraña. El examen físico pasta cálcica a veces no llena completamente la
apenas ofrece datos. En ocasiones la maniobra de vesícula, por lo que su aspecto radiográfico puede
Murphy es positiva. modificarse al cam- biar de posición el paciente.
El US tiene extrema importancia para llegar al Vesícula porcelana. Fue descrita por
diagnóstico, pues con el empleo del sistema zoom Grandchamp en 1798 y se caracteriza porque ésta
de que está provisto, es posible detectar cualquier se presenta oval y engrosada, con incrustaciones de
alteración en la pared vesicular. cal en sus pare- des. Se debe a una reacción
La colescistografía es también un estudio útil para conjuntiva acompañada de endarteritis y
el diagnóstico, ya que permite apreciar el contorno esclerosis hística, a la que se sobreañade una
vesicular. El examen de las radiografías requiere un infiltración grasa asociada a hiper- colesterolemia;
análisis cuidadoso y se aconseja incluso su lectura la precipitación de calcio favorece dicha
con una lupa. Son signos directos de la afección las infiltración.
irregularidades del contorno vesicular, con bordes Su sintomatología es la misma de las
colesterolo- sis. Radiológicamente el estudio
contrastado mues- tra una vesícula excluida. El
diagnóstico se establece
248
por medio de una placa simple, la cual demostrará mucosa y neuromatosis profunda o adventicial. En
la existencia de una vesícula visible de manera es- la primera se afecta el plexo situado en la lámina
pontánea a los rayos X, de aspecto irregular y no propia, por debajo del epitelio que tapiza la mucosa
homogéneo, diferente a la vesícula cálcica. en el lado luminal de la muscularis; mientras que
en la segunda son los elementos nerviosos
Diverticulosis intramural localizados en la parte externa de la muscularis los
Esta afección, descubierta por Malpighi en 1666, fue que se dañan y se acompañan de formación de
estudiada posteriormente por múltiples autores, en tejido cicatrizal. Desde el punto de vista clínico, el
particular Aschoff y Rokitansky; pero en 1924 es síntoma más relevante es el dolor localizado en el
Malpert quien demuestra de forma definitiva su ca- epigastrio, de intensidad variable. En ocasiones se
rácter no glandular y da a la lesión de base el nom- presentan cri- sis de cólico hepático florido, que
bre de senos de Rokitansky-Aschoff. Éstos no son recuerdan las pro- ducidas por la litiasis. No es
más que pequeñas evaginaciones saculares, infrecuente en estos pacientes una historia de
digitiformes o ramificadas, de la mucosa vesicular, intolerancia a las grasas, distensión abdominal
verdaderas hernias que pasan a través de la capa posprandial, náuseas, vómitos
muscular; llegan incluso a la serosa y producen una y sialorrea.
peritonitis sin signo alguno de enfermedad en la ve- La neuromatosis puede asociarse a la colestero-
sícula. La comunicación normal de estas evagina- losis y la diverticulosis intramural, y se acompaña
ciones con la mucosa, se oblitera en ocasiones y de un aumento de la actividad vesicular caracterizada
conduce a la formación de quistes, pero en ningún en el estudio contrastado o endovenoso, por hiper-
momento son glándulas verdaderas. Cuando se concentración, hiperexcitabilidad e hiperexcreción.
acompañan de engrosamiento de la muscular e hi- La neuromatosis superficial, en grado mínimo o
perplasia de la mucosa, reciben el nombre de ade- moderado, no produce alteraciones mucosas lo
nomiomatosis. sufi- cientemente significativas como para poder
Desde el punto de vista clínico presentan igual ser de- tectadas en la colecistografía, por lo que es
sintomatología que las colesterolosis. necesario un grado mayor de la afección para
En cuanto al diagnóstico, el US permite, con la formar neuromas susceptibles de ser detectados con
ayuda de su sistema zoom, apreciar las alteraciones este estudio.
que los divertículos producen en el contorno El US tiene en estos momentos una mayor sen-
vesicular sibilidad y especificidad que los estudios contras-
La colecistografía es igualmente útil, pues mues- tados.
tra, si el contraste se concentra en el interior de la El diagnóstico histológico de la neuromatosis
vesícula, un halo semejante a un rosario que circun- vesicular no es fácil, pues requiere la resección cui-
da a ésta, en la forma generalizada. Esto se debe a la dadosa de la vesícula y la fijación inmediata intra y
repleción de los divertículos por el contraste. extraluminal de la pieza, para más tarde realizar el
En la forma localizada, que casi siempre es fún- estudio microscópico, de preferencia previa colora-
dica, la imagen deja ver una muesca con aspecto de ción de Masson o, mejor aún, con impregnación
surco o luna creciente, la que en ocasiones simula argéntica, pues la coloración habitual con
un engrosamiento seudotumoral. hematoxi- lina-eosina es inadecuada para el
La variedad congénita se caracteriza por la forma diagnóstico.
en reloj de arena de la sombra vesicular, lo cual se Riopelle observó la asociación de neuromatosis
debe a la presencia de tabiques, con divertículos superficial de diversa magnitud con la colesterolo-
adyacentes a ellos. sis en el 61,9 % de sus casos, por lo que acuñó el
término neurolipoidosis para señalar la frecuencia
Neuromatosis de esta combinación.
Es la hipertrofia e hiperplasia del plexo neural autó-
nomo de la pared vesicular y se caracteriza por la
Complicaciones
proliferación de las fibras nerviosas, la neurogliosis Son fundamentalmente: la litiasis, la infección y las
y un aumento del número de células ganglionares. sifopatías.
Se divide en dos formas: neuromatosis superficial o
Tratamiento
El tratamiento será quirúrgico en la vesícula cálci-
ca, en la de porcelana, en la colesterolosis y en la
249
neuromatosis, así como en las formas asociadas a la tienen en solución en la bilis gracias a los coloides
litiasis. protectores, especialmente colatos alcalinos, fosfo-
En la diverticulosis intramural el tratamiento, ini- lípidos (lecitina) y jabones, y a los ácidos y sales
cialmente médico, irá encaminado a: biliares; y si se recuerda que en la vesícula la bilis
se concentra hasta 10 o 20 veces más, basta la
1. La corrección de la estasis vesicular mediante claudi- cación de los mecanismos encargados de
coleréticos y colagogos suaves, antiespasmó- mantener en solución a sus componentes para
dicos, drenaje biliar e inyecciones de dihidro- producir su pre- cipitación.
colato de sodio o de ciclobutirato sódico, con ¿Qué factores son los decisivos para que se pro-
el fin de aumentar la coleresis. duzca esta precipitación? Entre los más
2. La corrección eventual de trastornos hormo- incriminados se encuentran los siguientes: el
nales. aumento del mate- rial precipitable (colesterina y
3. La corrección de hipersensibilidad general o bilirrubina), la dis- minución de los agentes
local. estabilizadores (sales y ácidos biliares), la
infección, la estasis y factores metabólicos y
El tratamiento quirúrgico consiste en la colecis- hormonales.
tectomía, de preferencia laparoscópica, siempre que El exceso de colesterina, como se ve fundamen-
sea posible, con o sin intervención sobre la vía bi- talmente en los obesos, los sobrealimentados, los
liar principal, y se practicará no sólo en los casos sedentarios y las embarazadas, fue enunciado por
anteriormente señalados, sino también cuando el tra-
Chauffard como causante de litiasis. Pero existen
tamiento médico fracase, después de un ensayo se-
li- tiasis sin hipercolesterinemia, y, por otra parte,
rio de 3 a 6 meses, o cuando el estudio radiológico
no es significativa la relación entre las cifras de
muestre la presencia de formaciones seudotumorales
coles- terol y los cálculos, e incluso falta una
evidentes.
conexión cons- tante entre la colesterina en la
sangre y en la bilis. El aumento de la
bilirrubinemia, como se ve en los ícteros
COLECISTITIS hemolíticos, favorece la formación de cálculos
pigmentarios por el exceso de bilirrubina
Las colecistitis pueden ser calculosas o no calculosas en la bilis.
y ambas, a su vez, agudas y crónicas. La disminución de los elementos que mantienen
Colecistitis crónica disueltos los constituyentes de la bilis, fundamen-
talmente los ácidos y las sales biliares, es un factor
calculosa importante, ya que la colesterina precipita cuando
la concentración de éstos no es por lo menos 13 ve-
Esta afección tiene predilección manifiesta por el ces mayor que la suya.
sexo femenino, sobre todo por las multíparas, pero La infección (catarro litógeno de Maunyn) ha
en modo alguno resulta excepcional en el hombre. perdido defensores últimamente, pues si bien mu-
Su proporción aproximada es de 3:1. chas vesículas están infectadas e incluso en la quin-
Etiopatogenia ta parte de los cálculos se demuestra la existencia
Aunque es raro encontrar litiasis vesiculares com- de gérmenes vivos, no es menos cierto que hay un
pletamente latentes, resulta difícil determinar en qué por- centaje elevado de vesículas litiásicas estériles
época se producen los cálculos, los cuales han sido por completo. Esto apoya la posibilidad del origen
reportados aun en fetos muertos después del parto. asép- tico de los cálculos.
Sin embargo, en nuestro medio, los síntomas litiási- En cuanto a la estasis, no existe duda de que la
cos aparecen con mayor frecuencia entre los 30 permanencia prolongada de la bilis concentrada en
y 50 años. la vesícula, propicia condiciones favorables para la
La patogenia de la afección es aún un problema constitución de la litiasis; sin embargo, no basta
no resuelto. La colesterina y la bilirrubina se man- sólo la estasis para formar cálculos, pues en los
carcino- mas de la cabeza del páncreas, donde se
producen las mayores retenciones biliares, éstos
son infre- cuentes.
250
Plessier ha demostrado que la progesterona blo- origen aséptico; son pequeños e irregulares, múlti-
quea la acción de la colecistoquinina, y que en la ples y de color negruzco (Fig 25.1).
mujer embarazada la administración de ésta no pro- Los cálculos mixtos pueden ser únicos o múlti-
duce contracción vesicular. ples. Cuando son únicos tienen superficie rugosa y
Como se ve, ninguna de estas teorías explica por forma redondeada u ovoide, y cuando múltiples, li-
sí sola la génesis de la litiasis biliar, afección que se sos y facetados. Son pesados y de color variable. Al
mantiene aún como uno de los problemas no total- corte, sus constituyentes se colocan en capas que
mente resueltos de la medicina moderna. adoptan una disposición en cebolla (Fig. 25.2).
Anatomía patológica
Comprende el estudio de los cálculos biliares y el
de las lesiones de la vesícula.
Los cálculos son de tres tipos: de colesterina,
pigmentarios y mixtos (colesterina, bilirrubina y sa-
les de calcio).
Los cálculos de colesterina, a causa de su eleva-
do contenido de colesterol, son muy ligeros; por tal
motivo, aparecen flotando en la bilis cuando se toma
una radiografía de pie. Casi siempre son únicos, re-
dondeados u ovoides, de color blanquecino o lige-
ramente amarillento. Al corte tienen estriaciones
radiadas que parten del centro. A los rayos X son
transparentes y se les considera de origen aséptico.
Los cálculos pigmentarios están constituidos por
bilirrubinato de calcio y también se consideran de

Fig. 25.2. Cálculo vesicular único, de tipo mixto.

En ciertas formas, la vesícula se encuentra reple-


ta de un material llamado barro biliar, constituido
por pequeñas concreciones pigmentarias y arenosas
de color negruzco.
Existe también un tipo excepcional de cálculo,
formado por carbonato de calcio.
Respecto a las lesiones de la pared vesicular, va-
rían de acuerdo con el tipo de colecistitis crónica y
se caracterizan por un infiltrado inflamatorio cróni-
co, fundamentalmente linfocitario.

Cuadro clínico
Fig. 25.1. Litiasis vesicular por cálculos pigmentarios de
La colecistitis crónica calculosa puede evolucionar
bilirrubinato de calcio. en forma completamente silenciosa, sin dar mani-
festaciones clínicas; pero más a menudo provoca
251
trastornos dispépticos, como flatulencia, sensación Otros medios imagenológicos, como el estudio
de plenitud, intolerancia a las grasas, al huevo y a la radiológico simple, y los contrastados, como cole-
carne de cerdo. No son raras la migraña ni los cua- cistografía oral y colescistocolangiografía (prueba
dros alérgicos. Otras veces el paciente se queja de de Graham y Cole), si bien son útiles para el diag-
pirosis, dolor tardío, diarrea posprandial después de nóstico, han perdido vigencia ante todas las venta-
la ingestión de sopa, comidas ricas en grasas, etc. jas que ofrece el US.
La litiasis es capaz de simular cualquier tipo de En cuanto al drenaje biliar, ya no se usa con
dispepsia e incluso semejar la afección de otros ór- fines diagnósticos de litiasis biliar luego del
ganos, como ulcus duodenal y colon irritable. advenimien- to del ultrasonido, pero es útil para el
En el curso de su evolución suele presentarse un estudio ma- croscópico y microscópico de los tres
cuadro de dolor agudo e intenso, muy característi- tipos de bilis
co, que constituye el llamado cólico hepático, y que (A, B y C) que se extraen con su empleo; además,
tiene un gran valor diagnóstico, puesto que de ma- tiene un inestimable valor para detectar parásitos
en la zona biliopancreática.
nera general es la expresión de un accidente mecá-
nico provocado por la presencia de litiasis (aunque
Diagnóstico diferencial
puede haber cólicos sin cálculos).
En el terreno estrictamente clínico, hay que
El cólico hepático se presenta por lo general unas diferen- ciar la colecistitis calculosa de una serie de
horas después de las comidas, casi siempre a media afeccio- nes con las cuales puede confundirse.
noche. Se caracteriza por un intenso dolor en el re-
borde costal derecho, que se irradia a la escápula y 1. Ulcus gastroduodenal. Es más frecuente en
hombro derecho, cuello, epigastrio, región precordial los hombres, el dolor tiene ritmo y
y base del tórax. El paciente puede tener fiebre con periodicidad, y se acompaña generalmente de
escalofríos (fiebre hepatálgica de Chauffard). A ve- acidez.
ces aparece una ictericia con posteridad al cólico, 2. Pancreatitis crónica. En ocasiones coexiste
pero esto no es un accidente obligado del cólico he- con la litiasis biliar y se detecta por la
pático de origen vesicular y, cuando surge, debe sos- insuficiencia secretora del páncreas; se
pecharse la presencia de cálculos en el colécodo. acompaña de diarreas, esteatorrea y dolor
Al examen físico, el punto cístico (a nivel del en barra, que se irradia al hipocondrio
izquierdo.
ángulo que forman el reborde costal derecho y el
3. Colitis crónica. Se conoce por el dolor en cri-
músculo recto anterior del hemiabdomen homólo-
sis que recorre todo el abdomen, el
go) suele ser doloroso y el signo de Murphy positi- estreñimien- to interrumpido por diarreas
vo. Además se puede encontrar, con frecuencia, dolor mucosas y por los puntos dolorosos a lo largo
a la presión sobre las apófisis espinosas de las últi- del colon.
mas vértebras dorsales (8ª a la 12ª) y en la extremi- 4. Carcinoma del ángulo hepático del colon.
dad anterior de la undécima costilla derecha (punto Orientan al diagnóstico la pérdida de peso, la
de Binet). anemia y las crisis dolorosas abdominales,
que a veces van seguidas de diarreas.
Diagnóstico 5. Afecciones del riñón derecho (litiasis, ptosis,
Diagnóstico positivo pielonefritis). Se reconocen por el dolor lum-
El cuadro clínico y el examen físico orientan el diag- bar y los fenómenos urinarios
nóstico, pero son los estudios imagenológicos los
En cuanto al diagnóstico diferencial del cólico
que lo confirman.
he- pático, se plantean nuevos problemas todavía
En la actualidad, el US de las vías biliares es el
más delicados, puesto que las afecciones que
primer examen complementario que el médico debe entran en juego en tales circunstancias exigen una
indicar ante la sospecha de cualquier afección de ésta, solución urgente.
sea calculosa o no, por sus múltiples ventajas ya se-
ñaladas en otras partes de este capítulo. 1. Perforación de una úlcera gastroduodenal.
Los antecedentes del enfermo, el dolor
brusco en el epigastrio (dolor en puñalada), la
contractu- ra abdominal (vientre en tabla), el
timpanismo en la región hepática (signo de
Jaubert) y la
252
radiografía de abdomen simple que muestra un un cálculo en el conducto cístico, lo cual determina
neumoperitoneo, establecerán el diagnóstico de cambios vasculares en la vesícula, mala irrigación
perforación. de sus paredes e isquemia, y evolutivamente gan-
2. Apendicitis aguda subhepática. El dolor de co- grena y perforación. Desde el punto de vista
mienzo en el epigastrio irradiado a la fosa ilíaca clínico, existe dolor en el hipocondrio derecho con
derecha, la taquicardia y la ausencia de antece- contrac- tura de esa zona; por lo general se palpa la
dentes biliares, ayudan al diagnóstico. vesícula distendida, hay fiebre y en el hemograma
3. Cólico nefrítico derecho. Aquí el dolor es lum- se obser- va una leucocitosis. El US en primer
bar y se irradia a los genitales, con síntomas lugar y la laparascopia en segundo, establecerán el
diagnósti- co de certeza. En cuanto al tratamiento,
urinarios y en ocasiones íleo paralítico.
si bien al- gunos autores prefieren el médico
4. Pancreatitis aguda. Se caracteriza por un do-
a base de antibióticos, antinflamatorios y reposo,
lor irradiado a la izquierda, estado de colapso nosotros so- mos ardientes defensores del
vascular periférico y el vientre distendido. Los quirúrgico por los ex- celentes resultados que
análisis de laboratorio sobre los fermentos pan- hemos logrado.
creáticos serán elementos decisivos. Complicaciones crónicas. Son las siguientes:
5. Hepatitis aguda. En este caso hay hepatome- hidrocolecisto, vesícula escleroatrófica, fístulas
galia, íctero y aumento de las transaminasas. biliares externa e interna, odditis, litiasis
6. Neumonía de la base derecha. Aquí el dolor coledociana con su clásica tríada de Villard
durante la inspiración, los datos estetoacústicos (dolor, íctero, fie- bre), colangitis, abscesos
y el estudio radiográfico ayudarán al diagnós- hepáticos múltiples, cirro- sis biliar y el cáncer
tico. vesicular, que en todas las estadísticas se reporta
7. Infarto del miocardio. Además del dolor, exis- asociado a la litiasis, por lo menos en un 80 % de
te caída tensional, sudoración y alteraciones los casos.
electrocardiográficas.
8. Colecistitis aguda (ver complicaciones). Tratamiento
Evolución y complicaciones El tratamiento de la colecistitis crónica calculosa
está encaminado a prevenir las complicaciones de
Aunque se ha repetido que la colecistitis calculosa la li- tiasis y tiene 3 alternativas: quirúrgica,
puede evolucionar de una manera casi latente y no farmacoló- gica y litotripsia extracorpórea.
es extraño encontrar en las autopsias de ancianos, La primera es la preferida, pues elimina los
vesículas repletas de cálculos que no dieron mani- cálculos y la vesícula patológica. Tiene dos varian-
festaciones durante la vida, no debe inferirse de esto tes, la colecistectomía abierta, con la incisión con-
que la enfermedad se desarrolla sin repercutir sobre vencional o con la llamada microcolecistectomía,
el organismo y que no sea capaz de conducir a se- que como su nombre lo indica, utiliza una más
rias complicaciones. Por el contrario, las produce, y pequeña, y la colecistectomía laparoscópica,
a veces muy graves. Éstas pueden ser agudas y cró- realizada por pri- mera vez por J.Ph. Mouret en
nicas, sobre todo teniendo en cuenta su modo de apa- Lyon, Francia, en 1987. Esta última es el método de
rición y la conducta terapéutica posterior. elección en el momento actual, siempre que sea
Complicaciones agudas. Entre ellas están: empie- posible, por las ventajas que ofrece: estética, menos
ma, gangrena, perforación, peritonitis sin perfora- dolorosa, corta estadía, bajo costo y rápida
ción e íleo biliar; todas son tributarias de tratamiento reintegración social.
quirúrgico urgente. Las otras dos alternativas terapéuticas tienen
La pancreatitis aguda causada por el enclavamien- como inconveniente que dejan la vesícula
to de un cálculo en el esfínter de Oddi, recibirá tra- patológica, por lo que el porcentaje de recidivas de
tamiento médico inicial. Citemos, por último, la los cálculos es alto.
colecistitis aguda por impacto del cístico, complica- La farmacológia se basa en reducir la relación
ción muy frecuente en nuestro medio, caracterizada colesterol/sales biliares hasta el punto en que la bi-
como su nombre lo indica por el enclavamiento de lis no esté saturada de colesterol. En estas condicio-
nes, los cálculos de colesterol se van disolviendo
lentamente (1 a 2 mm/mes), hasta que el tamaño
253
permite su expulsión. Esto implica las siguientes con-
dicionantes: Colecistitis crónica
1. El tratamiento es efectivo sólo en cálculos de
no calculosa
colesterol (un 80 % de los casos), pero no lo es Anatómica, bacteriológica e histológicamente, esta
en cálculos de pigmentos biliares. Su eficacia colecistitis es igual a la calculosa.
disminuye mucho si el cálculo está calcificado. En su patogenia se han señalado trastornos
2. La vesícula debe ser funcional y las vías biliares moto- res, factores infecciosos, toxicoquímicos,
no deben estar obstruidas. alérgicos y metabólicos.
3. El tiempo de disolución es proporcional al ta- Su cuadro clínico es similar al de la forma
maño del cálculo. litiásica, con la variante de producir más síntomas
dispépticos que cólicos.
Utiliza como medicamentos dos ácidos biliares: El diagnóstico se hace por medio del US, la
el quenodesoxicólico y el ursodesoxicólico. Como colescitografía oral y el drenaje biliar.
los efectos secundarios del primero son superiores Su tratamiento está en dependencia de la sinto-
(diarreas dependientes de dosis, elevación de transa- matología. Los pacientes con dispepsia e intoleran-
minasas, hipercolesterolemia), se prefiere hoy en día cia a los alimentos, pero sin dolor, son tratados con
la monoterapia con el segundo (10 a 13 mg/kg/día) medidas higienodietéticas, coleréticos y colagogos,
o bien un tratamiento combinado de ambos áci-
así como con sedantes y tranquilizantes, al igual
dos (5mg/kg/día de cada uno). Con este método,
que cualquier otro factor patogénico existente.
el 50 % de los pacientes vuelve a tener cálculos a los
Ahora bien, aquellos con dolor en el epigastrio e
5 años.
hipocondrio derecho recurrente, con características
La litotripsia extracorpórea, desarrollada por el
alemán Dornier en la pasada década de los 80, se de cólico biliar muy sugestivo de ser secundario a
basa en la fragmentación de los cálculos biliares por disfunción vesicular, así como ante el fracaso del
las ondas de choque emanadas de un litotriptor; los tratamiento médico del grupo inicial, deben ser so-
cálculos deben ser reducidos a partículas menores metidos a tratamiento quirúrgico (exéresis) de la
de 5mm, pues los mayores no pueden atravesar el vesícula, de preferencia por vía laparoscópica.
conducto cístico para ser expulsados por la vía bi-
liar principal al duodeno. Dado que la recurrencia
Colecistitis aguda
es alta, su empleo debe asociarse, en los casos se-
leccionados, al tratamiento farmacológico ya des-
no calculosa
crito, para mejores resultados. Es una entidad rara en cuya patogenia se han seña-
Es necesario estar seguros, mediante estudios lado el reflujo pancreático, las infecciones tifopara-
imagenológicos, que la vesícula es funcional, pues tíficas, así como el colibacilo, shigelas,
son sus contracciones las que impulsan los fragmen- estafilococos y estreptococo fecal, la isquemia por
tos a pasar a la vía biliar principal. trombosis de la arteria cística y, últimamente, la
Se actuará sobre la vía biliar principal cuando exis- lisolecitina, sus- tancia con propiedades tóxicas
ta una enfermedad asociada, y en el caso específico sobre la membrana celular que resulta de la
de la litiasis, debe seleccionarse el método más idó- hidrólisis de la lecitina por un fosfolípido A, y que
neo para el paciente con el fin de solucionar el pro- en esta afección está eleva- da, tanto en la bilis
blema, sea éste la litotripsia extracorpórea, el hepática como en la vesicular.
quirúrgico convencional o laparoscópico o el que Su cuadro clínico, así como su diagnóstico y tra-
combinando sus dos vertientes, diagnóstica y tera- tamiento, no difieren de los de la forma aguda
péutica, alcanza el mismo fin. litiásica.
254
26
PANCREATITIS AGUDA
Concepto Se han observado alteraciones de la función pan-
creática cuando hay una elevación en la concentra-
La pancreatitis aguda (PA) es una inflamación agu-
ción sanguínea de alcohol, pero cuando este se
da del páncreas de causa múltiple, que posee un am-
administra por la vía oral, estimula la producción de
plio espectro de gravedad que varía desde un
ácido clorhídrico, el que a su vez estimula el pán-
trastorno ligero que responde al tratamiento, hasta
creas a través del mecanismo colecistoquinina-
uno de gravedad extrema, totalmente refractario.
pancreozimina. La ingestión excesiva de alcohol
Su incidencia se encuentra entre 1 y 5 x 10 000
puede provocar inflamación y edema de la mucosa
cada año, mientras que su mortalidad global alcan-
duodenal y, por consiguiente, obstrucción parcial de
za alrededor de un 10 % Si la afección es de la
la ampolla de Vater. Esta obstrucción parcial suma-
variedad necrotizante, fallecen entre el 20 y el 40 %
da a la estimulación continuada del páncreas, podría
de los pacientes, mientras que si aparecen compli-
desencadenar la pancreatitis.
caciones, la mortalidad resulta superior al 50 %.
Etiología Causas diversas
Existen muchos factores capaces de provocar una Existen factores causales cuyo mecanismo no se co-
PA. Entre los más frecuentes en nuestro medio es- noce totalmente. Entre los más frecuentes se
tán las enfermedades de las vías biliares y el alco- encuen- tran:
holismo, aunque también la producen causas
diversas y a veces desconocidas. 1. Inflamación pancreática a consecuencia de un
proceso sistémico, como ocurre en caso de pa-
Enfermedades de las vías biliares rotiditis, fiebre tifoidea, hepatitis viral, mono-
Las afecciones de las vías biliares se encuentran nucleosis infecciosa, leptospirosis, parasitismo
entre las causas más frecuentes de PA, fundamen- (ascaridiasis, hidatidosis), o por reflujo de ma-
talmente en mujeres. Entre ellas se destacan la terial infectado hacia el conducto pancreático.
colelitiasis, la colecistitis y las enfermedades del 2. Factores endocrinos: diabetes mellitus, hiper-
colédoco. paratiroidismo.
No se conoce bien el mecanismo a través del cual 3. Trastornos metabólicos: hipercalcemia, hiper-
se produce, aunque se ha insistido en un factor me- lipemia tipos I, IV y V, hemocromatosis.
cánico pasajero en el ámbito de la ampolla de Vater, 4. Factores obstructivos: obstrucción del
por los cálculos que emigran. conducto pancreático o de la ampolla de Vater
La PA del 3er. trimestre del embarazo se presenta por litiasis, neoplasia o inflamación,
asociada a la litiasis en el 90 % de los casos. poscolangiopancrea- tografía retrógrada
endoscópica, o por espas- mo, edema o
Alcohol inflamación del esfínter de Oddi.
Esta causa predomina entre los hombres. No se co- 5. La teoría del canal común biliopancreático
noce con exactitud el mecanismo de su acción so- como causa de la PA fue sugerida
bre el páncreas, aunque existen varias teorías al originalmente por Opie en 1901. Al existir
respecto. una obstrucción de la ampolla de Vater, se
produce un reflujo de bilis hacia los
conductos pancreáticos, lo que in- duce la
pancreatitis. Otra de las teorías es la

255
regurgitación duodenal en caso de un esfínter ción, que no sólo contribuyen a la respuesta
de Oddi incompetente. inflama- toria local, sino que, además, en casos
6. Trastornos vasculares: embolia ateromatosa de severos libe- ran sustancias vasoactivas, tales como
las arterias intrapancreáticas, enfermedades del bradikinina, prostaglandinas y péptidos, que
tejido conectivo con vasculitis. provocan efectos sistémicos.
7. Posoperatoria: de cirugía abdominal, cardíaca Al mismo tiempo se altera la microcirculación
o de trasplantes. pancreática, lo que ocasiona apelotonamiento eri-
8. Drogas: pueden mencionarse muchas: azatio- trocitario (sludge), hemaglutinación, incremento lo-
prina, L-asparginasa, sulfonamidas, etc. cal de tromboxano y radicales libres del oxígeno,
reducción de los niveles de óxido nítrico y un au-
DROGAS ASOCIADAS A LA PANCREATITIS mento de la permeabilidad capilar, así como acu-
AGUDA mulación de neutrófilos, lo que ocasiona la lesión
hística, pérdida de líquido hacia el espacio intersti-
Azatioprina Isoniacida
L-asparginasa Hidroclorotiazida cial y edema. Sus resultados son inflamación, ede-
6-mercaptopurina Furosemida ma, isquemia, trombosis, hemorragia y necrosis.
Sulfonamidas Estrógenos El proceso local se extiende a los espacios
Tetraciclina Ac. valproico peripancreáticos con liberación de factores tóxicos
Metronidazol Procainamida hacia la cavidad peritoneal y hacia la vía sistémica,
lo que causa las complicaciones a distancia, que es-
9. Otros: tumores pancreáticos, traumatismos. tán mediadas por vasodilatación capilar, aumento
del flujo sanguíneo, liberación de enzimas, radica-
Causa desconocida les libres del oxígeno, citoquinas, factor de necrosis
Se sabe que del 10 a 20 % de los casos de PA son de tumoral a (FNT-a) y sustancias vasotóxicas, que
causa desconocida. provocan el shock, el síndrome de distress respira-
torio agudo (SDRA) y la disfunción múltiple de ór-
Fisiopatología ganos (MODS), tan frecuentes en las formas graves
Normalmente las enzimas pancreáticas se segregan de esta entidad.
en forma inactiva (proenzimas) y se activan en el
duodeno por intermedio de la enteroquinasa de la Anatomía patológica
mucosa intestinal y de la tripsina. En la PA dichas Macroscópicamente, las principales características
proenzimas se activan de manera precoz en el pán- son: áreas de destrucción proteolítica del parénqui-
creas por un mecanismo no bien precisado; así, el ma que tienen un color gris blanquecino, hemorra-
tripsinógeno se convierte en tripsina a nivel del acini gias y zonas blancas (como yeso) de necrosis
y de los conductos pancreáticos, lo que altera di- adiposa. En la etapa inicial el edema suele provocar
chos conductos, el citoesqueleto de las células aumento del volumen y de la consistencia pancreá-
acinares y sus sitios de unión intercelular, e inicia la tica. Con el transcurso del tiempo, en los casos típi-
cascada de activación de las enzimas proteolíticas. cos el páncreas adquiere un aspecto abigarrado
Se supone que pequeñas cantidades de tripsina (como un mapa), con zonas hemorrágicas y áreas
activan las proenzimas de la fosfolipasa A y de la de reblandecimiento necrótico que alternan con
elastasa pancreática, entre otras, y estas enzimas ac- focos de necrosis adiposa. En un caso específico
tivadas se escapan y penetran en el parénquima del puede predominar cualquiera de los tres
órgano y los tejidos circundantes, por ruptura de la componentes. Microscópicamente, las alteraciones
barrera epitelial de los conductos pancreáticos. Esto básicas son: destrucción proteolítica del parénquima
provoca una irritación química por autodigestión, pancreático, necrosis de los vasos sanguíneos con
con inflamación, edema e ingurgitación vascular del hemorragias, necrosis del tejido adiposo por
páncreas. enzimas lipolíticas y reacción inflamatoria. La
Esta respuesta inflamatoria de fase aguda puede extensión y el predominio de cada una de estas
ser medida por medio de las Proteínas Asociadas a alteraciones dependen de la du- ración y gravedad
la Pancreatitis (I, II y III), y se acompaña de la activa- del proceso. En etapa muy tem- prana de la
ción del complemento y de la cascada de la coagula- enfermedad sólo se aprecia edema
intersticial.
256
La alteración histológica más característica con- irritación química. A veces es posible palpar una
siste en focos de necrosis en el tejido adiposo del tumoración en su parte alta. En otros casos se ha
estroma, en el peripancreático y en los depósitos de observado ictericia durante el episodio agudo, so-
la cavidad abdominal. También ocurren otros cam- bre todo en aquellos con afecciones concomitantes
bios, como la presencia en la cavidad abdominal de de las vías biliares. Aunque de manera tardía, es
un líquido seroso algo turbio y de color parduzco, posible encontrar el signo de Halstead, que son
en el que es posible identificar glóbulos oleosos (lí- man- chas cianóticas más frecuentes en la región
quido en “caldo de pollo”). Secundariamente puede lumbar, debidas a la acción del jugo pancreático
sobrevenir una infección bacteriana que produce una sobre el te- jido celular subcutáneo, así como el
peritonitis supurada. llamado signo de Cullen-Turner, que consiste en
La fase inicial conocida como pancreatitis aguda manchas amari- llentas alrededor del ombligo,
edematosa se caracteriza por la necrosis grasa y el consecutivas a la trans- formación de la
edema intersticial, pero no por necrosis pancreática. hemoglobina de la sangre derramada en la cavidad
En los casos más severos conocidos como pancrea- peritoneal.
titis aguda hemorrágica o necrotizante, existe ne-
crosis y hemorragia parenquimatosa, así como Exámenes complementarios
alteraciones de las funciones exocrina y endocrina Amilasa sérica. Sus valores normales dependen del
del páncreas. método empleado. En el sistema internacional es de
hasta 220 UI. Se eleva en la fase temprana del pro-
Cuadro clínico ceso, durante las primeras 2 a 12 h; en la PA no
Entre los antecedentes del paciente tienen valor los com- plicada se normaliza entre el 2do. y 5to.
de alcoholismo, litiasis biliar, obesidad y la presen- días, sin que exista relación entre la gravedad del
tación del cuadro luego de una comida abundante, proceso y sus valores. La persistencia de cifras
ya que el páncreas está en su fase más activa 2 h elevadas de amilasa sérica debe hacer sospechar el
después de ingerir alimentos. diagnóstico de un seudoquiste o de
El dolor constituye el síntoma más sobresaliente macroamilasemia.
y se debe a la distensión de la cápsula pancreática La lipemia puede interferir con la determinación
por el proceso inflamatorio, la peritonitis química y de la amilasa, y la destrucción acinar total dar valo-
la obstrucción o espasmo de los conductos pancreá- res normales de ésta durante la PA.
ticos. Su intensidad varía mucho, desde inicialmen- Normalmente, el 60 % de la amilasa sérica es sa-
te tolerable hasta tornarse muy intenso. Se localiza livar y el resto pancreática, pero la determinación
por lo general en el epigastrio, aunque también sue- de sus isoenzimas no resulta superior a la lipasa
le percibirse en otras partes del abdomen. En oca- sérica como ayuda para el diagnóstico.
siones se irradia al dorso, flancos y zona Amilasa urinaria. Aparece un aumento en la
retrosternal; resulta característica la irradiación “en concentración de la amilasa urinaria, que persiste
barra”. Puede acentuarse con el decúbito supino.La hasta 24 h después de su normalización en la sangre.
ausencia de dolor implica un mal pronóstico. Sus valores normales dependen del método emplea-
Se acompaña de náuseas y vómitos, y en los ca- do. En el sistema internacional es de hasta 1 200
sos más graves, de cianosis, piel fría y húmeda, ta- UI. La relación de aclaramiento amilasa/creatinina
quicardia e hipotensión arterial, hasta llegar al shock. se ha utilizado para tratar de mejorar la
Este último se debe a la reducción del volumen san- especificidad
guíneo y a la liberación de sustancias vasodilatado- diagnóstica. Se calcula de la forma siguiente:
ras e hipotensoras.
La temperatura se encuentra habitualmente alre- Cam/Ccr = [(amilasa en la orina)/(amilasa en el
dedor de 38 °C y raras veces supera los 39 °C; debe suero)] . [(creatinina en el suero)/
descartarse una infección sobreañadida si va más allá (creatinina en la orina)]
de este nivel.
El abdomen se distiende en fase temprana de la Su valor normal es de 1 a 4 % y se considera
enfermedad, a consecuencia de un íleo paralítico por anor- mal cuando es superior al 6 %. Tampoco
resulta su- perior a la lipasa sérica para el
diagnóstico.
Lipasa sérica. Generalmente se eleva después de
la amilasa, persiste un mayor tiempo alta y es más
257
específica que ella. Sus valores normales dependen dilatación del asa duodenal, agrandamiento del
del método empleado. En el sistema internacional mar- co duodenal o acumulación y estasis del bario
es de hasta 190 UI. Cuando se mantiene aumentada en las partes inferiores del duodeno, lo que se debe
más de 10 días, hay que sospechar una necrosis pan- al au- mento de volumen de la cabeza del páncreas.
creática con inflamación persistente, o una compli- Tam- bién es posible observar el signo del
cación, como el seudoquiste. colon interrumpido, que representa la distensión
Tripsina y ribonucleasa séricas. La única fuente del colon transverso con colapso del descendente.
de tripsina en el organismo es el páncreas, por lo Ultrasonido y tomografía axial. Constituyen los
que su incremento en la sangre contribuye al diag- métodos más precisos para el diagnóstico, capaces
nóstico de la PA. Su aumento en el suero es indica- de brindar información en cuanto a la existencia de
tivo de necrosis pancreática. edema, inflamación del tejido pancreático y de le-
Hemograma. El número de leucocitos suele estar siones concomitantes.
elevado, entre 10,0 . 109 y 30,0 . 109/L (10 000 a Laparoscopia. Demuestra las lesiones redondea-
30 000/mm3). El hematócrito y la hemoglobina das de citoesteatonecrosis, de tamaño variable, blan-
pueden estar disminuidos cuando hay hemorragia en co amarillentas, poco prominentes y con un halo
la cavidad peritoneal. rojizo, que se observan en el epiplón mayor y en el
Urea sanguínea. Se eleva en los casos graves
peritoneo parietal y visceral. También se detecta el
cuando hay shock y oliguria.
epiplón vascularizado con rechazamiento hacia de-
Calcio sérico. Frecuentemente existe una dismi-
nución del calcio entre el 3ro. y el 15to. días de la lante, hematomas en el peritoneo parietal, exudado
enfermedad. Sus cifras reflejan el grado de exten- serofibrinoso y dilatación del estómago y asas in-
sión de la necrosis, ya que la hipocalcemia se debe a testinales. En la forma hemorrágica se encuentra a
la movilización del calcio de la sangre, el cual se veces sangre libre en la cavidad abdominal.
combina con los ácidos grasos formados por la Diagnóstico
hidrólisis de la grasa en el páncreas. Cifras por de-
Diagnóstico positivo
bajo de 8 mg % (0,19 mmol/L) tienen mal pronóstico.
Glicemia. A veces hay una hiperglicemia transi- Debe plantearse el diagnóstico de PA ante todo pa-
toria. ciente que presente dolor en la región epigástrica o
Bilirrubina. En ocasiones se encuentra ligeramen- umbilical, con irradiación hacia los flancos derecho
te elevada, entre 20 y 40 mmol/L. e izquierdo, acompañado de vómitos (en sus
Potasio. No es infrecuente una hipocaliemia re- formas leves), así como de íctero, cianosis, piel
lacionada con la alcalosis, la administración de so- fría, hipo- tensión arterial y en ocasiones shock (en
lución salina y la pérdida de jugo gástrico por los sus formas más graves); temperatura de 38 °C y a
vómitos o por la aspiración nasogástrica. veces una masa tumoral en la región epigástrica y
Radiología. Aunque no existen signos radiológi- umbilical. Los exámenes de laboratorio,
cos patognomónicos de PA, en ocasiones aparecen especialmente la amilasa y la lipasa séricas, la
algunas anormalidades que sugieren el diagnóstico. imagenología y la
En la radiografía simple de tórax, la presencia de laparoscopia, confirmarán el diagnóstico.
atelectasias laminares, de infiltrados basales, la
elevación de los hemidiafragmas, la existencia de Diagnóstico diferencial
derrame pleural izquierdo o pericárdico y de edema Generalmente se realiza con las afecciones siguientes:
pulmonar, contribuyen al diagnóstico.
La radiografía simple de abdomen puede mostrar • Úlcera péptica perforada.
un íleo paralítico, borramiento del margen del psoas • Apendicitis aguda.
izquierdo, burbujas de aire extraluminales peripan- • Oclusión intestinal.
creáticas, calcificaciones o seudoquistes pancreáti- • Trombosis mesentérica.
cos; mientras que el estudio de estómago y duodeno • Colecistitis aguda.
(actualmente sustituido por el US y la TAC), deja • Cólico nefrítico izquierdo.
ver en ocasiones un desplazamiento del estómago, • Crisis gástrica de la tabes.
• Embarazo extrauterino roto.
258
Pronóstico • a1-antitripsina.
• Elastasa de polimorfonucleares.
Se han utilizado múltiples criterios para tratar de
• Péptido de activación del tripsinógeno.
precisar si los pacientes tienen una forma grave o no
de esta afección. Es por ello que se han empleado: Complicaciones
a) Las manifestaciones clínicas y los resultados
de los exámenes complementarios. Las complicaciones de la PA se muestran en el
b) El aspecto del páncreas en la TAC. cua- dro 26.1.
c) La presencia de enfermedades asociadas.
d) La respuesta inflamatoria sistémica. CUADRO 26.1
COMPLICACIONES DE LA PANCREATITIS AGUDA
El aspecto y el volumen del líquido obtenido por Pancreáticas
el lavado peritoneal, se relacionan con el nivel de • Necrosis pancreática o flemón.
gravedad del paciente portador de esta enfermedad. • Absceso pancreático o necrosis infectada.
Si es de color pajizo u oscuro, o su cantidad resulta • Seudoquiste o colección de líquido pancreático.
superior a 20 ml, el pronóstico es el de una PA grave.
Peripancreáticas
También entre los de este primer grupo se encuen- • Ascitis.
tran los criterios de Ranson. En pacientes con hasta 2 • Obstrucción de las vías biliares.
criterios presentes, la mortalidad es de aproximada- • Seudoquiste.
mente el 1 %; con 3 o 4, alcanza el 15 %; con 5 o 6, • Hemorragia intrabdominal.
el 40 %, y con 7 o más, el 100 %.
Sistémicas
Pulmonares
CRITERIOS DE RANSON PARA DETERMINAR • Hipoxia.
LA GRAVEDAD DE UNA PANCREATITIS AGUDA • Atelectasia.
• Neumonía.
Al ingreso Edad > 55 años • S. distress respiratorio agudo.
• Absceso mediastínico.
Leucocitos > 16 . 109/L
Cardiovasculares
Glucosa > 11 mmol/L
• Hipotensión/shock.
LDH > del doble de su valor normal
• Derrame pericárdico/taponamiento cardíaco.
TGO > de 6 veces su valor normal
• Arritmias.
A las 48 h Disminución del hematócrito > 10 %
Incremento de la urea sanguínea > 5mg/dl Digestivas
Calcio sérico < 8 mg/dl • Sangramiento digestivo.
PaO2 < 60 mm Hg • Infarto intestinal.
EB < -4 mmol/L Renales
Secuestro de volumen > 6l. • Oliguria.
LDH= Deshidrogenasa láctica. EB= Exceso de bases. • Azotemia.
TGO= Transaminasa glutámico- • Necrosis tubular aguda.
oxalacética. • Trombosis de la arteria o de la vena renal.
Metabólicas
• Hipocalcemia.
También se han utilizado otros sistemas pronósti- • Hiperglicemia.
cos, como los de Glasgow y Rabeneck. • Hiperlipemia.
Entre las nuevas técnicas que se han empleado • Acidosis metabólica.
Hematológicas
para medir la presencia y el grado de la respuesta
• Trombosis vascular.
inflamatoria sistémica y elaborar un pronóstico, se • Coagulación intravascular diseminada.
encuentra la determinación de niveles de: Neurológicas
• Psicosis.
• Fosfolipasa A2. • Encefalopatía.
• Proteína C reactiva. • Retinopatía de Purtscher.
• Proteína asociada a la pancreatitis. Periféricas
• Necrosis grasa (piel y huesos).
• Factor de necrosis tumoral (FNT).
• Artritis.
• Nivel de endotoxinas séricas. • S. disfunción múltiple de órganos.
• a2-macroglobulina.
259
Tratamiento ritoneo de sustancias como las enzimas digestivas o
Inicialmente se debe confirmar su causa y evaluar los mediadores de la inflamación. Aunque no ha
la severidad del cuadro, ya que ambos aspectos mo- dis- minuido la morbilidad o la mortalidad de esta
afec- ción, sí lo ha hecho la mortalidad por la
difican la terapéutica. La supresión de factores inci-
infección pancreática.
tantes como el alcohol en el caso de la pancreatitis
alcohólica, o la disminución de los niveles de triglicé- La infección pancreática (necrosis pancreática
ridos en la secundaria a hiperlipoproteinemia, resul- infectada, absceso pancreático, infección del
tan apropiados. seudo- quiste pancreático) alcanza una mortalidad
muy ele- vada, por lo que de sospecharse se debe
Tratamiento médico realizar aspiración mediante aguja bajo control de
Anteriormente se trataba de poner al páncreas “en la TAC, de la zona afectada. Generalmente se
reposo”, pero en la actualidad se suministran medi- obtienen gér- menes gramnegativos y la respuesta
das de apoyo que permitan el cese del proceso infla- es pobre al dre- naje percutáneo. La mejor respuesta
matorio. Entre éstas está el alivio del dolor, que si es a los antibióticos se obtiene con el uso de imipenem
intenso se trata con meperidina (100 mg), ya que la o quinolonas (do- sis y vías de administración en el
morfina provoca espasmo del esfínter de Oddi. capítulo “Sepsis”).
Hay que corregir los desequilibrios hidromineral
y acidobásico del paciente, el cual no recibirá ali-
Tratamiento quirúrgico
mentación o medicamentos por la vía oral. En gene-
Todos los autores coinciden en que el tratamiento
ral, no se debe de realizar la aspiración nasogástrica
por sonda en forma rutinaria, a menos que se trate inicial de la PA es médico y que está justificada la
de lograr el alivio sintomático del íleo paralítico pre- intervención quirúrgica en los pacientes graves que
sente, o existan náuseas o vómitos que no respon- no mejoren con él.
dan a la medicación habitual.
PRINCIPOS DEL MANEJO QUIRÚRGICO
DE LA PANCREATITIS AGUDA
El uso de antibióticos profilácticos, de medica-
mentos que disminuyan la secreción pancreática a. Pancreatitis necrotizante:
(bloqueadores de los receptores H 2, glucagón, atro- • Necrosis estéril Quirúrgico si no responde al
pina, somatostatina, octreotide, calcitonina o fluo- tratamiento médico.
ruracilo), así como de agentes que inhiban las • Necrosis infectada Debridamiento quirúrgico +
proteasas pancreáticas (aprotinina, gabexato), no ha lavado.
demostrado un beneficio que lo justifique ni modi- b. Absceso pancreático Drenaje bajo pantalla (TAC,
US).
fica el curso clínico de la enfermedad.
Drenaje quirúrgico si sepsis
Deben de vigilarse y tratarse las complicaciones. persistente.
Con las medidas hasta aquí mencionadas, evolucio- c. Seudoquiste pancreático Drenaje bajo pantalla (TAC,
nan en forma satisfactoria el 75 % de los pacientes. US).
En el caso de una PA grave, se comienza el trata- Drenaje quirúrgico
(2da. opción).
miento con el alivio del dolor y la reposición del
volumen perdido o secuestrado (preferiblemente con
La cirugía está indicada cuando hay infección
solución Ringer o salina fisiológica al 0,9 %), según
los principios que se establecieron en el capítulo de del árbol biliar, especialmente colangitis, así como
shock hipovolémico. Además de los aspectos antes cuan- do existan complicaciones infecciosas. La
enunciados, cobra importancia la nutrición del pa- exéresis del tejido pancreático necrótico es otra de
ciente por intermedio de las vías enteral ileal o pa- las indi- caciones.
renteral. La operación no debe practicarse, bajo ninguna
El uso de lavados peritoneales o de la diálisis circunstancia, mientras el paciente no se haya recu-
peritoneal tiene como objetivo la remoción del pe- perado del shock.

260
27
PANCREATITIS CRÓNICA
Concepto evolución clínica. Es la “enfermedad del conducto
pequeño”.
La pancreatitis crónica (PC) es la inflamación de la
glándula pancreática que se manifiesta por una al-
teración funcional progresiva, persistente e irrever-
Etiopatogenia
sible, con pocas posibilidades de curación con La PC tiene múltiples factores causales, conocidos
restitutio at integrum de las estructuras que confor- unos y desconocidos otros. Las que más han sido
man el parénquima, aun después de eliminarse el estudiadas son las debidas al alcoholismo y a las
posible factor causal; y que se caracteriza clínica- en- fermedades de las vías biliares; en ocasiones se
mente por un cuadro de dolor abdominal y sínto- se- ñala a la pancreatitis aguda como causa, pero se
mas de malabsorción intestinal, o que puede ha demostrado que a pesar de producir crisis no
evolucionar de forma asintomática en dependencia influye directamente en la progresión a la
cronicidad.
del tiempo de duración de la enfermedad y el grado
El mecanismo fisiopatológico exacto causante de
de afectación de la glándula pancreática.
la lesión glandular se desconoce, pero aunque di-
Clasificación chos mecanismos sean diferentes, el producto final
La clasificación de Marsella-Roma es la que, por es el mismo: daño acinar, en los conductos, en la
abordar el tema desde el punto de vista anatomofi- inervación y de las células de los islotes pancreáti-
siológico correlacionándolo con los posibles facto- cos, hasta que finalmente el tejido glandular es sus-
res etiológicos, se expone a continuación: tituido por tejido fibrótico.
La PC puede tener las causas siguientes:
1. Pancreatitis crónica calcificante.
2. Pancreatitis crónica obstructiva. 1. Alcohólica.
3. Pancreatitis crónica inflamatoria. 2. Obstructiva.
3. Hiperlipemia.
La PC calcificante se caracteriza por la inflama- 4. Desnutrición.
ción difusa de la glándula; con el examen radiológico 5. Fibrosis quística.
se visualizan calcificaciones en el conducto pancreá- 6. Familiar.
tico principal y desde el punto de vista etiológico se 7. Idiopática.
relaciona con la ingestión excesiva de alcohol.
La PC obstructiva se produce por la obstrucción Alcoholismo. Es la causa principal de pancreatitis
anterógrada del conducto pancreático consecutiva a en los países que son grandes consumidores de
daño por fibrosis, litiasis en la vía biliar principal, etc., alco- hol, pues interfiere con el transporte
que conducen a atrofia y fibrosis de los ácinos que se intercelular y la secreción de enzimas digestivas,
hallan situados por detrás. A este tipo de pancreati- aumenta la respuesta pancreática a la
tis se le llama “enfermedad del conducto grande”. colecistoquinina y promueve la formación de
En la PC inflamatoria sólo se afecta el tejido precipitados en los conductos pan- creáticos.
acinoso y los pequeños conductos; el daño del Obstrucción del conducto pancreático. Se debe a
conducto principal se evidencia tardíamente en su estenosis cicatrizal, enfermedades de las vías
biliares, tumores o alteraciones anatómicas que
llevan a la

261
atrofia acinosa, dilatación del conducto y fibrosis Cuadro clínico
de éste en áreas detrás de la obstrucción. Rara vez la PC es asintomática. Un síntoma habi-
Hiperlipemia. La hipertrigliceridemia puede ori- tual en esta afección es el dolor (90 %), que
ginar cuadros de pancreatitis aguda a repetición, con aparece en el epigastrio con irradiación frecuente
frecuencia asociados a hiperlipemia familiar, en dia- al dorso; unas veces se presenta en forma de
béticos mal tratados o que usan estrógenos. ataques agudos repetidos, y otras es menos
Desnutrición. Se manifiesta frecuentemente en intenso, cede con los cambios de posición y
pacientes de países subdesarrollados, en los que el tiene como antecedente el haber ingerido grandes
factor lesional está en relación con productos tóxi- cantidades de bebidas alco- hólicas o comidas muy
cos ingeridos en la dieta o presentes en el medio copiosas y ricas en grasa. Síndrome de
ambiente. malabsorción. La esteatorrea se pro- duce por la
Fibrosis quística. Se señala un defecto en los ca- falta de actividad de la lipasa en el duo- deno, la no
nales de cloruro que reduce el flujo de secreciones formación de micelas y la incapacidad para
pancreáticas, y como consecuencia el jugo pancreá- solubilizar las grasas en el intestino delgado; por
tico se halla supersaturado, lo que provoca la preci- lo general ello ocurre cuando se ha destruido
pitación de tapones de proteínas dentro de los aproximadamente el 90 % de la glándula. Las
conductos. heces son voluminosas, untuosas y flotantes, con
Pancreatitis familiar. Se hace referencia a un pa- un olor
trón autosómico dominante con penetrancia incom-
característico.
pleta en pacientes que desde niños tienen síntomas La alteración de la digestión de las proteínas au-
con dilatación del conducto principal en su evolu- menta la excreción de nitrógeno fecal, lo que se tra-
ción. duce por edemas, osteomalacia, etc. El déficit de
Pancreatitis idiopática. Aquí no existe un factor absorción de las vitaminas liposolubles origina
etiológico demostrable y se relaciona con procesos tras- tornos en la coagulación dependientes de la
inmunológicos. vitamina K, como son equimosis y hemorragias
Correlacionando los factores etiológicos con el por trauma- tismos pequeños.
daño que producen, fundamentalmente en el tejido La ictericia se puede observar en los enfermos
acinar de la glándula pancreática, se explica que esta con PC calcificante que afecta la cabeza del pán-
fibrosis conduzca a una insuficiencia funcional
creas, cuando se compromete la porción distal del
exocrina con disminución de las secreciones pan-
colédoco.
creáticas, lo que favorece la malabsorción de las gra-
sas y de las proteínas, y de una deficiente absorción La diabetes mellitus insulinodependiente se en-
de las vitaminas liposolubles (A, D, E, K), precipi- cuentra en pacientes con más de 5 años de evolu-
tación del calcio y malabsorción de la vitamina B12. ción de la enfermedad y en los cuales la
La alteración del metabolismo de la glucosa lleva a destrucción del parénquima glandular fluctúa entre
la diabetes insulinodependiente en estadios avan- 30 y 40 %; se manifiesta por neuropatía diabética,
zados de la enfermedad. pero el coma y la cetosis son poco frecuentes.

Anatomía patológica Examen físico


En los casos leves no hay manifestaciones en el ab-
La destrucción y pérdida del parénquima exocrino
domen. Se puede encontrar una masa palpable en
es la lesión fundamental de esta afección, ya sea di-
aquellos casos que presentan seudoquistes pancreá-
fusa o segmentaria. Hay dilatación del conducto prin-
ticos, íctero ligero si continúa la obstrucción, pérdi-
cipal (Wirsung) y de los conductillos con focos de
da de peso por la anorexia y la malabsorción, y
necrosis y formación de abscesos en casos graves,
fiebre ligera en caso de agudización.
que luego son sustituidos por tejido fibrótico y for-
mación de quistes y seudoquistes pancreáticos. A
Exámenes complementarios
nivel de los conductos se encuentran calcificacio-
nes y células. Hemograma. No se detectan alteraciones y si las
hay, se traducen por ligera leucocitosis y discreta
anemia.
Eritrosedimentación. Está acelerada.
262
Amilasa sérica y en la orina. En las crisis de agu- Ecografía y TAC. Permiten observar
dización se eleva y vuelve a la normalidad al ceder calcificacio- nes y dilatación del conducto, así
ésta; incluso, en algunos casos avanzados hay dis- como la presencia de seudoquistes (líquido
minución de esta enzima. encapsulado). La TAC es superior al diagnóstico
Glicemia. Puede elevarse por los ataques repeti- ultrasonográfico y muestra, además, el grado de
dos con lesión severa de los islotes. La hiperglice- atrofia glandular.
mia provocada suele mostrar una curva plana. RMN. La calidad de la imagen ha mejorado os-
Determinación del calcio plasmático. Se ha de- tensiblemente con el turbodestello, que permite
mostrado hipocalcemia en casos de crisis de agudi- pre- cisar detalles que hayan pasado inadvertidos
zación. con otros métodos.
Determinación de la concentración sérica de Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
(ERCP). Aporta entre un 70 y 90 % de positividad
tripsina. Tiene gran valor diagnóstico y una cifra
en el diagnóstico, más elevado aún si se realiza por
inferior a 20 mg/dl es específica de PC.
un endoscopista bien entrenado. La intubación del
Determinación de la grasa fecal en 24 horas. En
conducto de Wirsung y sus ramas permite compro-
casos de sospecha de esteatorrea, más de 7 g de gra- bar la existencia de estenosis, dilataciones, calcifi-
sa en heces después de una comida rica en esa sus- caciones y cálculos en la vía biliar, obtener líquido
tancia es diagnóstico de malabsorción. pancreático para estudio citológico y bioquímico, y
Determinación de nitrógeno fecal. Está aumenta- realizar maniobras terapéuticas que se describirán
do por déficit de enzimas proteolíticas. en el acápite de Tratamiento.
Lipasa sérica. Un valor por encima de 0,51 ml de
NaOH durante la crisis es patológico. Diagnóstico
Es bueno señalar que la alteración aislada de una Diagnóstico positivo
de estas pruebas por sí sola no es concluyente de Se realiza basado fundamentalmente en el cuadro
PC; por lo tanto, hay que tener muy en cuenta el clínico del paciente: dolor abdominal localizado en
cuadro clínico, además de éstas, y las pruebas de el epigastrio y región periumbilical mantenido por
funcionalismo pancreático, como es: días y semanas, que alterna con períodos de calma,
La prueba de estimulación con secretina y acompañado de náuseas, vómitos y diarreas, en
pancreozimina, llamada tubaje pancreático, en do- cuyo curso puede presentarse esteatorrea; todo esto
sis de 1 u/kg de peso por vía EV. Se colecciona el apoyado en los exámenes complementarios ya des-
jugo pancreático basal (previa intubación duodenal) critos.
y se determinan los volúmenes obtenidos, la con-
centración de sodio y bicarbonato, y las enzimas en Diagnóstico diferencial
el jugo pancreático. Durante la crisis dolorosa se deberá realizar con la
Un volumen inferior a 2 ml/kg de peso en 90 min, pancreatitis aguda: dolor más intenso, vómitos y
con una concentración de bicarbonato menor estado de shock, que no es el caso del paciente con PC.
de 90 meq/L, hacen sospechar fuertemente la exis- La úlcera péptica perforada tiene un cuadro más
tencia de una PC. aparatoso, en el que por lo común existe un antece-
dente ulceroso, con ingestión de irritantes de la mu-
cosa gástrica y un abdomen en tabla al examen
Estudios imagenológicos
físico. La placa de abdomen simple demuestra el
Radiografía simple. Es posible la demostración de
neumo-
calcificaciones pancreáticas como hallazgo radioló-
peritoneo.
gico en pacientes asintomáticos. Enfermedades de las vías biliares. Colelitiasis,
Rayos X de estómago y duodeno con técnica de colecistitis, el antecedente de ingestión de comidas
duodenografía hipotónica. Muestra alteraciones en- grasas, intolerancia a colecistoquinéticos, etc., ha-
tre 75 y 80 % de los casos; borramiento del patrón cen que sea difícil la diferenciación.
mucoso normal en el borde interno del marco En las etapas avanzadas de la enfermedad hay
duodenal, desaparición del tono de la pared duodenal, que hacer el diagnóstico diferencial con el cáncer
doble contorno y espiculaciones. de la cabeza del páncreas. La vesícula palpable y
el íctero que aumenta progresivamente son datos
clínicos importantes, y el estudio citológico de las
secreciones
263
pancreáticas obtenidas por tubaje pancreático o por bloqueadores H2 de histamina: ranitidina, 300 mg
ERCP es determinante. diarios al acostarse; cimetidina, 40 mg al acostarse;
En caso de existir esteatorrea, se debe diferenciar así como hidróxido de aluminio, 1 cucharada des-
de la enfermedad celíaca del adulto, que cursa con pués de cada comida.
dolores abdominales, esteatorrea, flatulencia, ane- Se deben aportar preparados de enzimas sustitu-
mia, edema, alteraciones óseas y atrofia muscular. tivas del tipo de extractos pancreáticos liofilizados,
Por último, hay que establecer la diferencia con a razón de 3 a 8 tabletas al día, y preparados ricos
trastornos dispépticos variados en relación con dis- en lipasa en la misma dosis. Garantizar el aporte de
quinesias biliares, y que por la clínica y exámenes las vitaminas liposolubles (A,D,E) y si el tiempo de
complementarios son totalmente excluibles. pro- trombina disminuye, administrar vitamina K
para evitar los sangramientos. Utilizar
Complicaciones anticolinérgicos, como el sulfato de atropina y el
Las más frecuentes son: seudoquistes, ascitis pan- bromuro de propan- telina, que disminuyen la
creática con derrame pleural y edema, hemorragia secreción de ácido y la estimulación de secretina:
gastrointestinal, absceso pancreático, obstrucción 50 a 100 mg media hora antes de cada comida.
parcial o total de la vía biliar, trombosis de la vena Se deben emplear analgésicos del tipo ácido
esplénica, ictericia y diabetes mellitus. acetil- salicílico, acetaminofén y, en ocasiones,
Tratamiento cuando no cede el dolor, se han usado los bloqueos,
Debe cubrir fundamentalmente los siguientes aspec- aunque éstos no han resuelto del todo.
tos: La diabetes pancreática se controla con dietas e
hipoglicemiantes orales, y rara vez se necesita del
1. Modificar los hábitos higienodietéticos. uso de la insulinoterapia.
2. Aliviar los síntomas. El tratamiento quirúrgico está indicado cuando
3. Evitar las recaídas. hay complicaciones, recurrencias y sospecha de
malignidad. Se utiliza en cada paciente la técnica
Modificar los hábitos higienodietéticos. Suspen- quirúrgica que más le beneficie.
der el alcohol y eliminar los factores etiológicos pre- Cuando se realiza ERCP, la cirugía endoscópica
cipitantes de la enfermedad, como son las afecciones es en la actualidad la más empleada, ya que permite
de las vías biliares, hiperlipemias, hiperglicemia, etc. hacer esfinterotomía, extracción de cálculos, esfin-
Una dieta balanceada que contenga cantidades teroplastia, etc., así como la colocación de endopró-
moderadas de grasa (30 %), con gran aporte de tesis que dejan libre el flujo del jugo
proteínas (25 %) y bajos niveles de carbohidratos biliopancreático. En la actualidad se emplean
(40 %), sería la idónea para un paciente con PC con medicamentos aná- logos a la somatostatina, que
esteatorrea. reducen la secreción pancreática al interferir el
Hay que evitar la ingestión de triglicéridos de control de retroalimenta- ción de ésta por
cadena larga y sustituirlos por suplementos de tri- colecistoquinina; por ejemplo: octeótrido, 200
glicéridos de cadena mediana. mcg subcutáneos, 3 veces al día. También se
Aliviar los síntomas. Tratamiento del dolor. Las utilizan antagonistas de la colecisto- quinina, que
enzimas pancreáticas en tabletas con cubierta enté- aminoran el dolor y la secreción pan- creática por
rica causan alivio al restablecer la retroalimentación reducción de la hiperestimulación del
negativa de la secreción pancreática con disminución páncreas.
de la hiperestimulación de la glándula por colecis- Evitar las recaídas. Para lograr esto se debe tratar
toquinina. Se utilizan dosis que aportan 2 800 UI de de eliminar los factores causales demostrables,
lipasa al duodeno en el período posprandial (2 a 3 h como son: alcoholismo, obstrucción de las vías
después de las comidas), en tabletas recubiertas con biliares por litiasis o estenosis (probada
capa entérica para evitar la acción del jugo gástrico endoscópicamente), evi- tar las comidas suculentas
sobre ellas. Son mejores respondedores los pacien- y copiosas, etc. Es muy importante que el paciente
tes con PC leve o moderada. Se debe asociar un agen- conozca de su enferme- dad y sea capaz de
te antisecretor del jugo gástrico, como son los contribuir a eliminar los factores que pueden
desencadenar las crisis y no hacer trans- gresiones
medicamentosas.
264
28
CÁNCER DEL PÁNCREAS EXOCRINO
El cáncer del páncreas reviste particular interés, ya trantes. La glándula está aumentada de volumen y a
que por la diversidad de sus manifestaciones clíni- veces presenta aspecto nodular.
cas y la localización retroperitoneal de la glándula,
en ocasiones resulta difícil establecer un diagnósti- Aspecto microscópico
co temprano, aun cuando se empleen los métodos Generalmente es bien diferenciado y el estudio de
de diagnóstico de que se dispone en la actualidad. su citoarquitectura muestra una disposición glandu-
Los tumores malignos del páncreas se originan de lar; puede secretar moco y las glándulas son peque-
los tejidos exocrino, endocrino o intersticial. Los ñas y atípicas. En ocasiones se encuentran signos de
carcinomas constituyen el 100 % de todas las neo- invasión a los conductos y vasos vecinos.
plasias digestivas, y los adenocarcinomas ducta- Suele propagarse por contigüidad (duodeno, co-
les (80 %), adenocarcinomas de células grandes (5 %) lédoco, bazo, glándulas suprarrenales, colon trans-
y cistoadenocarcinomas (5 %) son los que con ma- verso, estómago y vena esplénica) y en orden de
yor frecuencia afectan el páncreas exocrino. Menos frecuencia invade hígado, ganglios linfáticos regio-
comunes resultan los carcinomas coloide y escamo- nales, peritoneo, pleura, pulmones y médula ósea.
so, y el carcinoide. Cuadro clínico
Frecuencia La localización del tumor influye de manera espe-
cial en el cuadro clínico. Según asiente en la
En la actualidad ha llegado a constituir la cuarta cabeza, el cuerpo o la cola del órgano, se poducirán
causa de muerte por cáncer, superado sólo por el de tres sín- dromes: pancreatobiliar de Chauffard,
pulmón, mama y colon. pancreatosolar y pancreatotumoral,
Afecta más a los hombres que a las mujeres en respectivamente.
una proporción de 3: 2, sobre todo entre los 55 y 70 El síndrome pancreatobiliar de Chauffard se ob-
años de edad. La cabeza del órgano es el asiento de serva en los tumores de la cabeza del páncrea y la
la lesión en el 75 % de los casos, y el cuerpo y la ampolla de Vater. La ictericia, síntoma dominante,
cola, en el 20 y 5 %, respectivamente. es de tipo obstructivo y progresiva, y se acompaña
de prurito intenso y colestasis hepática, además de
Etiología y epidemiología una vesícula biliar palpable e indolora (signo de
Algunos factores son considerados predisponentes, Courvoisier-Terrier). En ocasiones la vesícula no se
tales como la pancreatitis crónica (calcificada), la palpa.
ingestión excesiva de alcohol, el tabaquismo y la El síndrome pancreatosolar se presenta cuando
colecistitis en la mujer. el tumor se localiza en el cuerpo del páncreas y se
Se señala que la exposición a carcinógenos quí- ca- racteriza por un cuadro doloroso abdominal.
micos industriales (nitrosamina, azasenina, benci- Este dolor tiene algunas modalidades, pero en
dina) durante 10 años, aumenta la incidencia 5 veces. sentido general es intenso, sordo, localizado en el
Anatomía patológica hemiab- domen superior, se exacerba en horas de la
Aspecto macroscópico noche y con el decúbito dorsal; no tiene relación
El tumor varía entre 1 y 15 cm de diámetro, tiene un con la di- gestión y se alivia en ocasiones con la
color grisáceo y los bordes poco precisos e infil- autoflexión. Las relaciones anatómicas del cuerpo
pancreático explican el dolor, ya que el tumor
comprime por

265
detrás el plexo solar, así como el mesentérico y el sospecharse de una pancreatopatía subyacente, que
esplénico. La distensión del conducto pancreático pudiera ser un cáncer del cuerpo del páncreas.
de Wirsung contribuye también a la producción del Poliartritis y nódulos cutáneos. Algunos casos
dolor. de carcinoma del páncreas hacen su presentación
El síndrome pancreatotumoral es mucho menos con un cuadro articular de tumefacción y dolor, y
común que los dos anteriores y se observa en los pe- queños nódulos dolorosos subcutáneos. Se ha
tumores que se localizan en la cola del páncrea, don- des- crito una paniculitis con artritis y eosinofilia,
de se originan con mayor frecuencia quistes y seu- que se plantea depende de la actividad lipasa del
doquistes. Se caracteriza por una masa tumoral
tumor. Exámenes complementarios
palpable en el hipocondrio izquierdo, que obliga a
establecer el diagnóstico diferencial con los tumo- Amilasa y lipasa séricas. Suelen estar aumentadas
res del cuerpo del estómago, seudoquistes de la cola cuando se produce obstrucción del conducto pan-
del páncreas y esplenomegalias de diversa índole. creático, o disminuidas cuando hay destrucción
Puede acompañarse de hipersensibilidad en el hipo- neoplásica de la glándula; pero lo más frecuente es
condrio izquierdo y un soplo abdominal a causa de que sus valores no se modifiquen.
la compresión de la arteria esplénica por el tumor Glicemia. En ocasiones está aumentada. La
prue- ba de tolerancia a la glucosa (PTG) se
Manifestaciones generales altera con más frecuencia que las cifras de
Hay pérdida de peso que llega a la emaciación, y glicemia.
astenia marcada. El apetito se pierde tempranamen- Absorsión de las grasas. Hay esteatorrea en el 10
te y es característica una anorexia pertinaz, sobre % de los pacientes (más de 7 g de grasa en las
todo a alimentos grasos y carnes; resulta significati- heces de 24 h).
va la aversión completa a los alimentos. También se Antígeno carcinoembrionario. Es positivo en
presentan plenitud gástrica y flatulencia, así como el 90 % de los enfermos, pero no patognómico, ya
náuseas, vómitos y esteatorrea. que a veces lo es también en otras enfermedades,
como la pancreatitis crónica y el cáncer del colon.
Otros síntomas
Hoy se habla de un marcador tumoral de utilidad
En ocasiones el cáncer del páncreas se manifiesta
práctica: el CA 19-9.
por síntomas inesperados e inexplicables, que me-
Puebas de función hepática. Una vez desarrolla-
recen especial atención.
Dolor abdominal agudo. El enfermo presenta un da la obstrucción de las vías biliares extrahepáticas,
dolor abdominal agudo, náuseas, vómitos y fiebre, aparecen las alteraciones humorales características
que suele confundirse con una pancreatitis o una del íctero obstructivo, como hiperbilirrubinemia di-
colecistitis, sobre todo en pacientes de edad avanzada. recta, hipercolesterolemia y aumento de la
Sangramiento digestivo (hematemesis y melena). fosfatasa alcalina.
Puede deberse a la extensión del tumor hacia el duo- Radiografía de estómago y duodeno. Es posible
deno o el estómago, con ulceración posterior de encontrar rigidez y ensanchamiento del marco
ambos, o de una manera secundaria a compresión duodenal, expresión de la invasión de este segmen-
portal (hipertensión portal prehepática) y várices to por el tumor.
esofagogástricas resultantes. Angiografía pancreática. Tiene gran utilidad,
Fenómenos tromboembólicos. El carcinoma pue- pues se le señala una positividad diagnóstica de
de manifestarse inicialmente por trombosis de una un 75 a 90 %. Pone en evidencia las alteraciones
vena periférica y edema, o por tromboflebitis reci- vascula- res de la glándula y, además, permite
divante migratoria. Estos trastornos son más frecuen- definir si el tumor es operable o no.
tes en casos de tumores del cuerpo y la cola del US. Con él se determina la forma, el tamaño, la
páncreas. Se señala que son manifestaciones para- estructura y la densidad del páncreas, aunque en
neoplásicas del tumor. oca- siones en pacientes obesos o en aquellos con
Hiperglicemia. Cuando la hiperglicemia o la glu- inter- posición de gases, el sonografista no lo
cosuria se presentan en un enfermo de edad avanza- logra visualizar; sin embargo, es un método no
da, sin antecedentes de diabetes mellitus, debe invasivo que continúa manteniendo su utilidad.
266
Colangiopancreatografía retrógrada endoscópi- El cáncer del cuerpo pancreático se confunde
ca con angiografía. Es un método invasivo especí- con todas las causas de dolor persistente en el
fico en el diagnóstico; puede demostrar obstrucción, epigas- trio, y en cuanto al de la cola, hay que
estenosis o desplazamiento de los conductos, con distinguirlo de los tumores del cuerpo del
una alta positividad. En ocasiones provoca compli- estómago que crecen y se proyectan hacia el
caciones, tales como pancreatitis o colangitis. hipocondrio izquierdo, y de las esplenomegalias,
TAC. Demuestra las alteraciones de tamaño y for- aunque debe insistirse en que su diagnóstico
ma de la gládula con un margen de positividad alto resulta difícil.
(más de un 80 %).
Aspiración percutánea del tumor para estudio Evolución y pronóstico
citológico (guiada por US o TAC). Es positiva en La evolución es por lo general rápida. Las causas
el 85 o 90 % de los casos. principales de muerte son la diseminación progresi-
Laparascopia. Muestra la participación hepática va, la obstrucción biliar y la insuficiencia hepática.
de la enfermedad y las alteraciones que se producen El pronóstico es sombrío, con una supervivencia
sobre las vías biliares. que flutúa entre 6 meses y 1 año. Se señala que el
cistoadenocarcinoma es potencialmente curable
Diagnóstico con
Diagnóstico positivo resección quirúrgica.
La asociación de ictericia obstructiva que se inten-
sifica de manera progresiva y vesícula palpable no Tratamiento
dolorosa, establecen el diagnóstico clínico de cán- El tratamiento del cáncer del páncreas resulta
cer de la cabeza del páncreas, que se confirma prin- bastante desalentador. La evolución normal de la
cipalmente con la colangiopancreatografía retrógrada
enfermedad resulta rápida y progresiva,
al mostrar la obstrucción y dilatación del colédoco.
inependientemente de la existencia de metástasis o
El cáncer del cuerpo, mucho más difícil de diag-
no.
nosticar, se plantea ante un cuadro de dolor rebelde
en el epigastrio, acompañado de emaciación y a ve- El único tratamiento definitivo del carcinoma
ces de diarreas. En este caso, como en el de la cola, pan- creático es la resección quirúrgica.
las investigaciones complementarias, tanto el US En cada caso particular, según la localización y
como la TAC, son imprescindibles para establecer extensión del tumor, el cirujano debe determinar el
el diagnóstico. proceder quirúrgico que empleará: cirugía derivativa
Debe tomarse en cuenta que en ocasiones las ex- con radioterapia o quimioterapia, o ambas. En caso
presiones clínicas iniciales de la enfermedad son de enfermedad diseminada o en presencia de icteri-
confusas y los hallazgos de laboratorio, así como cia obstructiva, se utilizará tratamiento paliativo
los estudios imagenológicos, no son concluyentes; con cirugía derivativa.
se impone en estos casos la laparotomía como pro- El tratamiento médico va encaminado a:
cedimiento diagnóstico.
1. Mantener un buen estado nutritivo en el en-
fermo.
Diagnóstico diferencial
2. Aliviar el dolor con el uso de narcóticos o tra-
El cáncer de la cabeza del páncreas debe diferen-
tamiento paliativo con radioterapia externa.
ciarse de la neoplasia del colédoco, del ampuloma
de Vater y de la pancreatitis crónica, así como de Se puede utilizar quimioterapia con 5-fluoracilo
aquellas hepatopatías que tengan un componente
a razón de 500 mg/m2 de superficie corporal, por
colostásico importante. Sólo los estudios comple-
vía EV por 3 o 4 días, lo que se repite cada mes.
mentarios establecen la diferencia.
Por último, no debe olvidarse el apoyo psíquico
que debe brindar el médico al paciente y a sus
fami- liares.
267
29
SÍNDROME DE MALABSORCIÓN
INTESTINAL
Para que se produzca la asimilación correcta de los na B12, y la absorción del agua y los electrólitos se
alimentos, se necesita que los procesos de digestión efectúa en el intestino delgado y en el colon, en es-
y absorción de éstos se lleven a cabo de forma nor- pecial en el ciego.
mal en sus tres fases digestivas: Un fallo en las fases digestivas origina el síndro-
me de malabsorción intestinal (SMA).
1. Digestión intraluminal o fase luminal
El proceso de digestión comienza en la boca con la Concepto
saliva y continúa en el estómago con la acción del El SMA es un cuadro clínico caracterizado por
ácido y la pepsina; prosigue en el intestino delgado diarreas, esteatorrea, pérdida notable de peso, ane-
con la acción emulsificante de la bilis y la ayuda del mia y desnutrición, que se produce como expresión
páncreas exocrino, el cual tiene un papel fundamen- del trastorno en la absorción de varios nutrientes,
tal en el desdoblamiento a sustratos más simples de como grasas, proteínas, carbohidratos, vitaminas y
las grasas (monoglicéridos y ácidos grasos), carbo- minerales, al alterarse por múltiples causas las fun-
hidratos (monosacáridos y disacáridos) y proteínas ciones normales digestivas del intestino delgado o,
(péptidos y aminoácidos) por su secreción de lipasa, al menos, una de ellas.
amilasa y proteasa, respectivamente.
Etiopatogenia
2. Digestión terminal o fase mucosa
Es fácil determinar, según la función digestiva que
En ella se concluye la hidrólisis de los carbohidra-
esté alterada, las distintas causas del SMA y su
tos y de los péptidos, mediante la acción de las
pato- genia, aunque debe señalarse que no es raro
disacaridasas y peptidasas, respectivamente, en el
que una misma enfermedad pueda producirlo por
borde en cepillo de la mucosa del intestino delgado.
alteracio- nes en diferentes fases de la digestión, así
como que en otros casos se desconozca su
3. Transporte transepitelial o fase absortiva
mecanismo de pro- ducción.
Los nutrientes se absorben mediante el enterocito
intestinal y aquí pasan por varios procesos: trans- I. Alteración en la digestión intraluminal.
porte activo, difusión pasiva, difusión facilitada y a) Trastorno en la hidrólisis de los nutrientes.
la endocitosis, hasta llegar a la circulación sistémi- 1. Producirán SMA aquellas afecciones del
ca (linfática y venosa). páncreas (pancreatitis crónica, carcinoma
La absorción de los nutrientes se realiza a lo lar- del páncreas, fibrosis quística, pancreatec-
go de todo el intestino delgado y algunos lo hacen tomía) que provoquen un déficit modera-
más en una zona que en otra. Así tenemos que el do o severo de las enzimas pancreáticas
hierro, el calcio y las grasas se absorben más en el que realizan fundamentalmente la diges-
intestino delgado proximal; los azúcares, el ácido tión de las grasas.
fólico y las vitaminas hidrosolubles lo hacen mejor 2. Modificación del medio donde actúan las
en el intestino delgado proximal y medio; los ami- enzimas por la existencia de un pH muy
noácidos, en la parte media del intestino delgado o bajo, como sucede en el síndrome de
yeyuno; en la parte del íleon (intestino delgado Zollinger-Ellison, en el que se inactiva la
distal), principalmente las sales biliares y la vitami- lipasa, por lo que la mala digestión de las

268
grasas contribuye a la diarrea que se ve malabsorción de monosacáridos; en esta
en esta afección. situación los azúcares que se
3. Un fallo en la mezcla normal de las metabolizan a glucosa o a galactosa no
enzimas con los nutrientes porque haya se toleran.
un tránsito rápido, como sucede en los 2. Imposibilidad de transportar los lípidos
pacientes gastrectomizados. por parte de las células epiteliales de la
b) Pertubación en la formación de las micelas. mu- cosa intestinal, por una deficiencia
Para que se realice la digestión de las gra- auto- sómica recesiva rara de
sas, se necesita de las micelas, y las sales lipoproteína beta
biliares son fundamentales para su produc- (abetalipoproteinemia), lo que causa un
ción; por lo que todas las situaciones que defecto en la formación de quilomicrones,
provoquen una disminución de las sales y no se absorben las grasas normalmente.
biliares en la luz intestinal, ocasionan un fallo 3. Es posible que existan variaciones en el
en dicho proceso, como se ve en las afecciones transporte de aminoácidos bibásicos,
hepáticas, en las colestasis intra y extrahe- como se observa en la cistinuria, y en el
páticas y en las enfermedades que interrum- de ami- noácidos neutros, como en la
pen la circulación enterohepática de las sales enfermedad de Hartnup.
biliares, como la resección del íleon o la b) Disturbio primario de la mucosa intestinal.
ileítis regional (ver enfermedad de Crohn). Tiene lugar una lesión difusa en la mucosa
La actividad de las sales biliares suele dis- intestinal que provoca una disminución de
minuir al producirse su desconjugación en la superficie funcional de absorción, que sue-
el curso de un tratamiento bacteriano exce- le obedecer a múltiples causas: no infeccio-
sivo en el intestino delgado, como se ve en sa, como el esprue celíaco, que tiene una
varias entidades: fístulas, estenosis, estados fuerte carga genética, y en el que la altera-
de hipomotilidad en el curso de la diabetes ción básica es la sensibilidad al gluten; in-
mellitus y la esclerodermia; también puede flamatoria, como la enteritis por radiación,
precipitarse cuando el pH es muy bajo, como en la cual intervienen además otros meca-
ocurre en el síndrome de Zollinger-Ellison. nismos en la producción de la
Por otros mecanismos, varios fármacos como malabsorción, como es la linfagiectasia por
la neomicina y la colestiramina alteran la obstrucción lin- fática y el crecimiento
concentración de las sales biliares. bacteriano excesivo. Otras causas son las
II. Alteración en la digestión terminal. infecciones intestina- les, como el esprue
Ocurre una dificultad en la hidrólisis de los tropical y la enfermedad de Whipple, y la
carbohidratos en el borde en cepillo (microve- infiltración, como la amiloidosis, la cual
llosidades) de las células epiteliales intestina- también añade otros fac- tores en la
les, en el curso de la deficiencia de disacaridasa patogenia del SMA; tal es el cre- cimiento
y de la más común, la de lactasa, que puede bacteriano excesivo en el intestino delgado
ser primaria (genética o familiar) o secundaria secundario a trastornos de la moti- lidad de
(adquirida), lo cual hace que la lactosa llegue la pared intestinal, extensa isquemia de la
al colon sin hidrolizarse, actúe sobre ella la mucosa y fallo exocrino pancreático por
flora bacteriana y se formen ácidos grasos de infiltración amiloide del páncreas (ver
cadena corta, que tienen gran capacidad “Amiloidosis”).
osmótica; se produce así una gran cantidad de c) Disminución de la superficie de absorción.
La malabsorción dependerá de la localiza-
gases y una diarrea acuosa ácida.
ción y extensión de la resección intestinal,
III. Alteración de la fase de transporte transepite-
así como del estado funcional del páncreas,
lial o fase absortiva.
hígado y del resto del intestino; la enferme-
a) Fallo en el transporte transepitelial. dad más representativa es el síndrome del
1. Puede haber trastornos en el transporte intestino corto.
de glucosa y galactosa, como se ve en la IV. Alteración en el transporte linfático.
Se produce cuando hay una obstrucción linfá-
tica que provoca una dificultad en la
absorción
269
de los quilomicrones y de las lipoproteínas, lo 2. Trastorno primario de la mucosa intestinal.
cual origina una esteatorrea y una enteropatía • Esprue no tropical (enfermedad celíaca).
perdedora de proteínas, que da lugar a desnu- • Enteritis por radiación.*
trición y edemas por hipoproteinemia; esto se • Infección intestinal.
ve en el linfoma intestinal, en la linfagiectasia • Esprue tropical.
intestinal primaria, tuberculosis intestinal y en • Enfermedad de Whipple.
otros procesos ya mencionados. • Enteritis infecciosa aguda.
A continuación se expone la clasificación etiopa- • Infecciones parasitarias.
togénica del SMA, en la que se incluyen las afec- • Amiloidosis.*
ciones más frecuentes. 3. Superficie de absorción inadecuada.
• Síndrome del intestino corto.
Clasificación etiopatogénica
IV. Alteración en el transporte linfático.
I. Alteración en la digestión luminal. 1. Obstrucción linfática.
a) Trastorno en la hidrólisis de los nutrientes. • Linfoma intestinal.*
1. Insuficiencia pancreática exocrina. • Linfangiectasia intestinal.
• Pancreatitis crónica. • Tuberculosis intestinal.
• Cáncer del páncreas.
• Fibrosis quística. Cuadro clínico y fisiopatología
• Pancreatectomía.
Al principio hay ligeros cambios en el ritmo intesti-
2. Síndrome de Zollinger-Ellison (gastrino-
nal y en la consistencia y volumen de las heces, a
ma).*
lo que en ocasiones el paciente no da importancia;
3. Síndrome posgastrectomía* lue- go se presenta la diarrea abundante en
b) Disminución en la concentración de sales cantidad, con un promedio de 5 o 6 veces al día,
biliares en el intestino (con perturbación en por un aumento de la secreción y alteración de la
la formación de micelas). absorción de agua, electrólitos y ácidos biliares, y
1. Enfermedades hepáticas. la no absorción de ácidos grasos, que tienen un
• Hepatopatías parenquimatosas. efecto irritante sobre el colon. Las heces son
• Colestasis (intra o extrahepáticas). anormalmente voluminosas, sin forma, espumosas,
2. Crecimiento bacteriano. de color amarillo o gris, grasosas, que flotan en el
• Estenosis. agua, con gotas de grasa en la su- perficie, de olor
• Fístulas. fétido, verdadera esteatorrea, por un aumento de la
• Divertículos del intestino delgado. grasa en ellas.
• Estados de hipomotilidad (diabetes me- Hay una marcada pérdida de peso con desnutri-
llitus, esclerodermia) ción, como expresión de la deficiente absorción de
3. Interrupción de la circulación enterohe- las grasas, carbohidratos y proteínas, que produce
pática de las sales biliares. una pérdida de calorías y anorexia. El enfermo se
• Resección ileal* queja de dolor abdominal difuso, que traduce una
• Ileítis regional (enfermedad de Crohn)* inflamación o distensión del intestino o una afec-
4. Fármacos. ción pancreática. Puede tener flatulencia y
• Neomicina. borborigmos por la fermentación bacteriana de los
• Carbonato cálcico. carbohidratos no absorbidos.
• Colestiramina Otros síntomas presentes son parestesias, tetania
II. Alteración en la digestión terminal. y dolores óseos por malabsorción de calcio, magne-
• Deficiencia de disacaridasa. sio, vitamina D y proteínas; manifestaciones
III. Alteración en la fase absortiva. hemorrágicas por déficit absortivo de vitamina K;
1. Fallo en el transporte transepitelial. nicturia, por retraso en la absorción de agua; ame-
• Malabsorción de monosacáridos. norrea, impotencia e infertilidad por la desnutrición
• Abetalipoproteinemia. generalizada; ceguera nocturna por el trastorno en
* la absorción de la vitamina A, que produce un défi-
Malabsorción causada por varios factores.
cit de ésta, así como manifestaciones de neuropatía
270
periférica, tales como hiporreflexia osteotendinosa y El patrón radiológico de malabsorción está
apalestesia por la falta de vitamina B12 y tiamina. En cons- tituido por las alteraciones siguientes:
el examen físico se encuentra palidez cuta-
1. Dilatación y segmentación de las asas intesti-
neomucosa (es frecuente un tinte melanodérmico)
nales.
como expresión de la anemia con que cursa la enfer-
medad, la que se debe a la malabsorción de hierro, 2. Floculación del bario con asas rellenas de lí-
vitamina B12, ácido fólico y piridoxina; glositis, quido que provocan fragmentación y segmen-
tación de la columna de bario.
queilosis y estomatitis, por el déficit de hierro, vita-
3. Retardo del tránsito intestinal, o más raramen-
mina B12, folato y otras vitaminas; hipotensión arte-
te, aceleración.
rial por la pérdida de líquidos y electrólitos; 4. Signo del vaciado o moulage (da la impresión
dermatitis e hiperqueratosis por carencia de vitami- de un segmento de asa lleno de cera).
na A, zinc y niacina, y edemas por deficiencia de
proteínas. Biopsia del intestino delgado. Por vía oral, a tra-
Puede producirse litiasis renal oxálica, al unirse vés del endoscopio gastrointestinal alto en el duo-
los ácidos grasos no absorbidos con el calcio, lo que deno distal, es de una utilidad incalculable para
impide que este se una al ácido oxálico, aumente su llegar al diagnóstico etiológico del SMA
absorción y se concentre el oxalato en los riñones. secundario a una enfermedad del intestino delgado
Exámenes complementarios en sí.
La mayoría de los exámenes complementarios para En el cuadro 29.1 se señalan las afecciones que
el diagnóstico del SMA, detectan una alteración en presentan alteraciones en la biopsia del intestino
la función absortiva o digestiva, y algunos orientan delgado, y como se observa, son pocas las enferme-
hacia un diagnóstico específico, por lo que hay que dades en que la biopsia siempre es patológica y
recurrir a varias pruebas para llegar al diagnóstico. diag- nóstica.
Hemograma. Existe anemia de morfología varia-
ble, leucopenia y trombocitopenia. CUADRO 29.1
Alteraciones humorales. Son características de ENFERMEDADES CON SMA EN LAS CUALES
ESTÁ ALTERADA LA BIOPSIA INTESTINAL
este síndrome, las siguientes:
I. Afecciones en las que la biopsia está alterada y es
1. Hipoalbuminemia e hipoglobulinemia. Sugie-
diag- nóstica.
ren una enteropatía con pérdida de proteínas.
• Abetalipoproteinemia.
2. Calcio, sodio, potasio, magnesio y zinc séricos. • Enfermedad de Whipple.
Están disminuidos. II. Afecciones en las cuales la biopsia es diagnóstica,
3. Colesterol y lípidos. Están bajos, sobre todo en pero la lesión es dispersa.
las alteraciones acompañadas de esteatorrea im- • Amiloidosis.
portante. • Enfermedad de Crohn.
4. Tiempo de protrombina. Se encuentra prolon- • Enteritis eosinofílica.
• Linfangiectasia.
gado.
• Linfoma.
5. Carotenos séricos. Están disminuidos, prueba III. Afecciones en las que la biopsia está alterada, pero
muy adecuada para detectar SMA, si se exclu- no es diagnóstica
yó mala digestión. • Esprue celíaco.
6. Vitamina A sérica. Está disminuida. • Esprue tropical.
7. Heces fecales. Se debe indicar un examen • Enteritis por radiación.
• Enteritis por fármacos.
macroscópico y parasitológico.
• Sídrome de Zollinger-Ellison.

Radiología del intestino delgado. En muchos ca-


Pruebas de absorción intestinal
sos debe extenderse al esófago, estómago y colon,
Solamente se señalarán las más importantes:
ya que estos pueden poner al descubierto afecciones
Determinación cuantitativa de la grasa en
como esclerodermia, síndrome de Zollinger-Ellison
las heces fecales. Es una prueba para demostrar
y fístulas intestinales, entre otras.
la es- teatorrea, pero en la práctica es
incómoda y muy difícil de realizar en algunos
hospitales. Se da al
271
paciente en los días previos una dieta rica en gra- mina B12 por vía IM con la finalidad de llenar los
sas (80-100 g/día), luego se recogen las heces duran- depósitos, luego se le da 1 ug de cianocobalamina
te 3 días y se hace, mediante el método químico, el marcada con Co57 por vía oral y se recoge la orina
análisis de lípidos fecales en una muestra de 24 h. durante las 24 h siguientes; si la excreción urinaria
Lo normal es que se eliminen < 6g en 24 h, con un de la radiactividad es < 8 %, hay malabsorción de
coeficiente de absorción de grasas > 95 % con esta vitamina B12. Esta prueba es de utilidad para definir
dieta; en los enfermos con SMA con esteatorrea si esta malabsorción de cianocobalamina es por
hay > 6g en 24 h. tras- tornos gástricos, intestinales, insuficiencia
Estudio cualitativo de la grasa en las heces. Es pancreá- tica o por crecimiento bacteriano
una prueba útil si se realiza de forma adecuada, y si excesivo, por lo que dicho estudio tiene varias
se da al enfermo una dieta rica en grasas, permite fases en las que se añaden distintas sustancias y se
detectar fibras musculares no digeridas, grasas neu- comprueba si se nor- malizan o no sus valores; de
tras y grasas divididas. Cuando el paciente tiene una esta forma se descartan cada una de las afecciones
esteatorrea ligera < 10g/24 h, el 25 % de los resulta- que modifican la llegada de la vitamina B12 a los
dos son falsos negativos, y el índice de falsos positi- receptores del íleon terminal. Si la malabsorción de
vos es de un 15 %. vitamina B12 mejora cuan- do se le asocia factor
Prueba de absorción de la D-xilosa. Es la prueba
intrínseco porcino, esto indica que es secundaria a
que más se utiliza para definir la capacidad de ab-
una anemia perniciosa, y si la mejoría ocurre
sorción de la mucosa del intestino delgado. La D-
cuando junto a la vitamina B12 se le da extracto
xilosa es una pentosa, que a diferencia de la glucosa,
no se asimila por absorción activa, sino pasiva. Se pancreático, es porque el enfermo tiene una
administran 25 g de D-xilosa por vía oral y es nor- insuficiencia pancreática exocrina. Si persistie- ra
la malabsorción de la cobalamina, se repite el es-
mal una excreción urinaria ³ 5g en 5 h. En la lesión
tudio luego de 4 días de tratamiento antibiótico
del intestino delgado proximal, como el esprue tro-
pical y el no tropical, y en el crecimiento bacteriano (metronidazol, 250 mg 3 veces al día); si este trata-
excesivo, la absorción y excreción de xilosa dismi- miento resuelve la malabsorción de vitamina B12, es
nuyen. En la insuficiencia pancreática la absorción porque hay un crecimiento bacteriano (anaerobio)
de xilosa es normal. En pacientes con ascitis se ob- excesivo. Si la malabsorción persiste, se piensa que
tienen valores bajos. Invalida la prueba la presencia hay un daño en el receptor ileal (enfermedad de
de insuficiencia renal y la obtención incompleta de Crohn, resección ileal, linfoma); en este caso el pa-
orina. ciente debe recibir mensualmente 100 ug de vitami-
Se debe medir el nivel sanguíneo de xilosa a las 2 h na B12 IM.
de su ingestión, y un valor de 2 mmol/L (30 mg/dl) Estudio del aliento. Hay dos pruebas de alta
o mayor, indican una absorción normal. confiabilidad: la prueba del aliento de lactosa (tras
Prueba de Schilling de absorción de la vitami- la administración de 50 g de lactosa), que está ele-
na B12. Se administra al paciente 1 000 ug de vita- vada en la deficiencia de lactasa, y la prueba del
aliento de C14-xilosa, que está elevada en el creci-
miento bacteriano excesivo.
INTERPRETACIÓN DE LA PRUEBA DE SCHILLING

Fase 1 Fase 2 Fase 3 Fase 4


Vitamina B Vitamina B12 + Vitamina B12 + Vitamina B12 +
12
factor intrínseco extracto pancreático antibióticos
(metronidazol)

Anemia perniciosa Disminuido. Normal. Disminuido. Disminuido.


por gastrectomía.
Insuficiencia pancreática. Disminuido. Disminuido. Normal. Disminuido.
Lesión ileal. Disminuido. Disminuido. Disminuido. Disminuido.
Crecimiento bacteriano Disminuido. Disminuido. Disminuido. Disminuido.
excesivo.

272
Lactosa H2. Está elevada en el crecimiento define si es secundario a una enfermedad del intes-
bacteriano excesivo, pero es una prueba que aunque tino delgado o a una enfermedad pancreática, para
tiene una excelente seguridad, su sensibilidad y es- lo cual se indica la prueba de la D-xilosa urinaria,
pecificidad no son adecuadas. que permite diferenciarlas. Si la absorción de xilosa
Cultivo del aspirado intestinal. > 103 microrga- es normal, se realizan pruebas de función
nismos/ml (anaerobios) es sospechoso y >105 micror- pancreáti- ca. Si en la radiografía simple del
ganismos/ml es diagnóstico de crecimiento abdomen aparece calcificación difusa del páncreas,
bacteriano excesivo intestinal. es muy probable que esté dañado el 80 % del
Otras pruebas. Las pruebas de función pancreá- páncreas exocrino. La prueba de la bentiromida está
tica, como la de secretina y de la bentiromida, tienen alterada en el 80 a 90 % de los casos cuando la
resultados anormales en la insuficiencia pancreática. esteatorrea es pancreática; este examen se
complementa con el valor de la tripsina sérica,
Algoritmo para evaluar ya que aumenta la especificidad. Si dichas pruebas
la malabsorción no son diagnósticas, hay que reali- zar la de la
Una vez que se ha definido por la anamnesis y el secretina.
examen físico que el paciente tiene un SMA, hay Si la prueba de xilosa es anormal, se indican los
que orientar su estudio tratando de hacerlo de una estudios del intestino delgado. Las del aliento (C14-
forma lógica y eficaz; de ahí el valor del algoritmo xilosa, lactosa H ) están alteradas en el
que se presenta en el cuadro 29.2. crecimiento2
Se inicia el estudio con la indicación del caroteno bacteriano excesivo. Si son normales, se ordenan
sérico y la prueba cualitativa de grasa en heces, lo ra- diografía y biopsia del intestino delgado.
que diagnostica en su conjunto la esteatorrea en Si el paciente no tiene esteatorrea, se realizarán
el 85 % de los casos, sobre todo en aquellos que los estudios para diagnosticar una malabsorción se-
eliminan más de 15 g de grasa al día. Después se lectiva de los nutrientes aislados (prueba del aliento
de lactosa-H2, prueba de Schilling, etc.).
CUADRO 29.2
ALGORITMO PARA ORIENTAR EL ESTUDIO DEL SMA

Anamnesis y examen físico


sugerentes del SMA

Caroteno sérico + prueba cualitativa de grasa en heces

Normal Anormal

Pruebas selectivas Xilosa urinaria


• Folato sérico
• Cobalamina sérica
• Prueba del aliento de Normal Anormal
lactosa • Radiografía simple • Prueba del aliento de
• Prueba de Schilling del abdomen C14 xilosa
• Prueba de bentiromida • Prueba del aliento de
• Tripsina sérica lactosa H2
• Prueba de secretina

Normal Anormal
• Radiografía simple del • Cultivo de intestino
abdomen delgado
• Biopsia del intestino
delgado

273
Tratamiento en 8 a 12 h si el tiempo de protrombina
A continuación se expone el tratamiento inespecífi- no se ha normalizado.
• Ácido fólico. Entre otros en el esprue celía-
co del SMA, así como el específico según las enfer-
medades que lo producen. co. Tabletas de 1 y 5 mg. Se dan 5 mg/día
por un mes, y después 1 mg/día como
I. Medidas inespecíficas man- tenimiento.
1. Administración de sales minerales. • Complejo de vitamina B. Cualquier prepa-
• Calcio. Se administran 1 200 mg de calcio rado multivitamínico, 1 tableta al día.
elemental diario, por vía oral en forma de: 3. Suplementos calóricos. Están indicados en
a) Gluconato de calcio (93mg Ca 2+/g), 5g el crecimiento bacteriano excesivo, en la
3 veces al día. en- teritis por radiación, síndrome del
b) Carbonato de calcio (200 mg Ca 2+/ ta- intestino corto y en la abetalipoproteinemia.
bleta 500 mg), 1 a 2 g/día, divididos en • Triglicéridos de cadena media (aceite de
varias dosis. TCM, 8 cal/ml). Administrar el 60 % de
c) Carbonato de calcio, 2 tabletas de cal- la ingestión de grasa como aceite de
trate o 2 1/2 tabletas de Os-cal 500. TCM,
d) Gluconato de calcio (solución al 10 %, 60 ml/día=480 cal/día.
9,3 mg Ca 2+/ml), 10 ml por vía EV, ad- 4. Aporte de proteínas.
ministrados en 5 min, lentamente. • Albúmina humana baja en sal (0,25 g/ml).
• Magnesio. Viene como gluconato y sulfato: Se administran 50 a 100 g/día, por 3 a 7
a) Gluconato de magnesio (29mg Mg 2+/ días, por vía EV para aumentar un valor
tableta 500mg), 1 a 4 g/día, divididos sérico de albúmina muy disminuido.
en varias dosis. • Globulina sérica inmunitaria (0,165 g/ml).
b) Sulfato de magnesio (sol. 50%, 1 ml Se dan 0,05 ml/kg, cada 3 a 4 semanas,
contiene 500 mg de la sal), 2 ml 2 veces por vía IM, a pacientes con hipogamma-
al día, por vía EV. globulinemia e infección recurrente.
• Hierro. Puede darse por vía oral o parente- 5. Antidiarreicos.
ral. • Clorhidrato de difenoxilato (5 mg), 2 ta-
a) Sulfato ferroso ( 60 mg hierro elemen- bletas al inicio y después de cada defeca-
tal/tableta 300 mg) 1 tableta 3 veces al ción, sin exceder de 8 tabletas al día.
día. • Clorhidrato de loperamida. Cápsulas de 2
b) Imferón, por vía IM. La dosis debe mg; se dan 2 cápsulas al inicio y
calcularse según la gravedad de la ane- después de cada defecación, sin exceder
mia. de 8 cápsu- las al día.
• Zinc. Sulfato de zinc (89 mg de zinc ele- II. Medidas específicas.
mental/cápsula de 220 mg), 1 cápsula 3 1. Suplementos pancreáticos en la insuficien-
veces al día. cia pancreática y en las hepatopatías.
2. Administración de vitaminas. • Pancreatina, 6 a 8 tabletas o 3 preparados
• Vitamina A. (25 000 U de vitamina A por de microesferas con cubierta entérica en
cápsula); en carencias graves, 100 000 a cada comida.
200 000 unidades diarias, luego 25 000 2. Antagonistas del receptor H2.
unidades por día como mantenimiento. • Cimetidina o ranitidina. Se usan en dosis
• Vitamina B12. 100 ug/día por 2 semanas, elevadas en el gastrinoma y como tratamien-
luego 100 ug mensual, por vía IM. to adyuvante en la insuficiencia pancreá-
tica exocrina (ver “Pancreatitis crónica”).
• Vitamina D. Ergocalciferol (D2, 50 000 UI/
cápsula), 50 000 UI 3 veces por semana. Están indicados, además, en el síndrome
• Vitamina K. Menadiona, tabletas de vita- del intestino corto.
mina K, 5 a 10 mg/día. En caso de sangra- 3. Agentes que se combinan con las sales
miento agudo, pasar lentamente por vía EV biliares y que están indicados en las resec-
un ámpula de 50 mg en 10 min y repetir ciones ileales y en el síndrome del intestino
corto.
274
• Colestiramina. Se administra por vía oral,
1 a 2 pk antes del desayuno y la comida.
ESPRUE CELÍACO
4. Corticoides suprarrenales. Se emplean en la
enfermedad de Crohn, enteritis eosinofílica Fue descrito en 1888 por Gee en los niños, y en
y esprue celíaco. 1932 en los adultos por Thaysen. Se le conoce por
diver- sos nombres: esprue no tropical, enteropatía
• Prednisona. Se comienza con 40 a 60 mg/
induci- da por gluten, esteatorrea idiopática,
día por 2 semanas, después se disminuyen
enfermedad celíaca del adulto, etc.
5 mg cada semana hasta la dosis de man-
No se sabe bien la prevalencia de esta enferme-
tenimiento, que es de 5 a 15 mg diarios. dad; en el Reino Unido se señala el 0,03 % y en
5. Fármacos antiparasitarios. Suecia, el 0,35 %; es frecuente en la raza blanca y
• Giardia lamblia. Metronidazol, tabletas predomina en las mujeres (70 %).
de 250 mg, 3 al día por 1 semana; o clorhi- Etiopatogenia
drato de quinacrina, tabletas de 100 mg, 3
Ya en 1950 Dicke comprobó que el gluten,
al día por 1 semana.
proteína que contiene el trigo y los cereales
• Estrongiloidiasis. Tiabendazol, 25 mg/kg/ relacionados con éste (cebada, centeno y avena),
día, por vía oral, por 2 o 3 días. era el causante de las alteraciones que se
• A. duodenale, N. americanus. Tiabendazol, producían en el intestino del- gado de los pacientes
25 mg/kg/día, 2 veces al día por 2 días, con esprue celíaco.
por vía oral. La parte tóxica del gluten es su fracción soluble
6. Antibióticos. Están indicados en el creci- en alcohol, los polipéptidos de gliadina, que son ri-
miento bacteriano excesivo, esprue tropical cos en glutamina y que mediante electroforesis se
y en la enfermedad de Whipple. separan en los subgrupos gamma, beta, delta y alfa;
• Crecimiento bacteriano excesivo. sus péptidos son tóxicos y provocan lesión intesti-
a) Cefalosporina (Keflex), 250 mg 4 ve- nal cuando se da al paciente celíaco en remisión.
ces al día y metronidazol, 250 mg 3 Se ha tratado de explicar por varios mecanismos
veces al día, durante 10 días. el hecho de que la dieta con gluten provoque des-
trucción del epitelio intestinal.
b) Derivado del ácido clavulánico, 250 mg
3 veces al día, durante 10 días. 1. Deficiencia enzimática y teoría tóxica: que el
c) Tetraciclina, 250 mg 4 veces al día, enfermo con esprue celíaco carezca de una
durante 10 días, como alternativa. peptidasa específica en las mucosas, por lo
• Esprue tropical. que no se puede hidrolizar el gluten o sus
a) Tetraciclina, 250 mg 4 veces al día, péptidos con glutamina a péptidos más
durante 4 semanas; algunos necesitan simples; estos péptidos tóxicos se acumulan
hasta 2 meses. en la mucosa y lesionan la superficie de
absorción de las célu- las, que se descaman en
• Enfermedad de Whipple.
la luz intestinal.
a) Sulfaprín, 500 mg 4 veces al día, por
2. Teoría inmunológica: se ha planteado que el
vía oral, durante 1 año. gluten o sus metabolitos sean capaces de
origi- nar una reacción inmunitaria en la
A continuación se exponen en forma muy breve mucosa in- testinal, a favor de lo cual está la
algunas de las enfermedades que ejemplifican el presencia de un infiltrado inflamatorio de
SMA, tales como el esprue celíaco, el esprue tropi- células mononu- cleares en la lámina propia
cal y la enfermedad de Whipple, que son los proto- de la mucosa, la existencia de anticuerpos
tipos de malabsorción por disminución del área de anormales frente a la gliadina en los
absorción en la superficie del intestino delgado el pacientes con esprue celíaco, disminución de
primero y de causa infecciosa los dos últimos. IgM, así como la buena res- puesta a los
corticosteroides.
3. Factores genéticos: se ha encontrado una inci-
dencia en hermanos mucho mayor que en la
población general, por lo que se piensa que el
275
esprue celíaco pudiera heredarse mediante un El esprue celíaco es un SMA típico; el paciente
gen dominante de penetrancia incompleta. En tiene diarrea, esteatorrea, pérdida de peso y disten-
estos enfermos se hallan con mayor frecuencia sión abdominal, con todos los demás síntomas y
determinados antígenos de histocompatibilidad, sig- nos ya descritos.
HLA-DR3 y HLA-DQW2. En el 70 a 90 % de Se señala la asociación del esprue celíaco con la
los celíacos se ha encontrado el fenotipo HLA- dermatitis herpetiforme, diabetes mellitus, colangitis
DR3, el cual en la población general es de 20 esclerosante primaria y colitis linfocítica.
a 25 %. Los antígenos de HLA podrían estar Exámenes complementarios
unidos a los genes de la respuesta inmunitaria, Sólo se mencionarán aquí los estudios específicos,
lo que predispondría a la producción de anti-
así como los hallazgos de la biopsia yeyunal, ya
cuerpos patógenos antigluten, que provocarían
que los demás exámenes fueron señalados al
la unión del gluten a las células epiteliales y
principio de forma general.
ocasionarían la lesión hística.
4. Factor ambiental: actualmente se plantea que 1. Anticuerpos antigliadina IgG, IgA o ambos.
el serotipo 12 de adenovirus (Ad12) quizás Están presentes en el 90 % de los enfermos y
desempeñe un papel en la patogenia del esprue sus títulos descienden luego de la dieta sin
celíaco; esto se sustenta por: 1) la misma se- gluten.
cuencia de aminoácidos entre una parte de la 2. Anticuerpos antiendomisio. Se encuentran ni-
gliadina A y la proteína E16 codificada por el veles elevados en más del 90 % de los casos,
virus, y 2) incidencia elevada de anticuerpos que después del tratamiento disminuyen.
frente a Ad12 en los no tratados. 3. Anticuerpos antirreticulina. Menos sensibles
y más específicos que los antigliadina, se
En realidad, aunque no es posible integrar los fac- ven también en otras entidades que dañan la
tores genéticos, inmunitarios y dietéticos (gluten) en muco- sa del intestino delgado, como la
la patogenia del esprue celíaco, tampoco pueden enfermedad de Crohn.
verse de forma aislada. Realmente, la determinación de estos tres anti-
En el esprue celíaco, debido a la alteración de la cuerpos brinda máxima sensibilidad y especi-
mucosa intestinal, se produce disminución de las ficidad para diagnosticar el esprue celíaco, así
disacaridasas, fundamentalmente la lactasa, así como como para evaluar la respuesta al tratamiento
la liberación de hormonas pancreatotrópicas (secre- y la adaptación del paciente a una dieta sin
tina y colecistocinina), lo que provoca una reduc- gluten. Son utilizados, además, para detectar
ción secundaria de la función pancreática exocrina. la enfermedad en sus familiares.
Cuadro clínico 4. Biopsia yeyunal. En esta dolencia solamente
El esprue celíaco se presenta a cualquier edad, una está afectada la mucosa intestinal y permanece
vez que se utilice el gluten en la dieta. Es en la in- indemne el resto de las capas de la pared. Las
fancia donde se observan los primeros síntomas, lesiones son más llamativas en el yeyuno que
momento en que se debe hacer el diagnóstico e im- en el íleon. La mucosa está lisa, aplanada, con
poner el tratamiento específico; si no se realiza el ausencia de las vellosidades, y hay hiperplasia
diagnóstico, se señala que en algunos casos los sín- críptica, con infiltración de células inflamato-
tomas llegan a desaparecer en la adolescencia para rias en la lámina propia. El epitelio de la su-
reaparecer entre la tercera y la sexta décadas de la perficie está alterado y las células absortivas
vida. En el adulto tiene la característica de poseer son cúbicas en lugar de cilíndricas, con un es-
un debut agudo, en ocasiones desencadenado por una caso borde en cepillo y un infiltrado inflama-
infección intestinal, embarazo, etc. torio de linfocitos en la capa epitelial. Iguales
Se debe señalar que a veces estos enfermos no lesiones suelen verse en el esprue tropical, el
tienen síntomas digestivos y sólo está presente una linfoma, etc. Reviste mal pronóstico encontrar
anemia ferropénica sin pérdida de sangre o dolores depósitos densos de colágena, por lo demás no
óseos por osteomalacia. frecuente.
276
Complicaciones Pronóstico
1. Linfoma intestinal. Es excelente en aquellos enfermos que responden a
2. Yeyunitis crónica ulcerativa no granulomatosa. la dieta sin gluten. Es fatal en el esprue celíaco gra-
3. Dermatitis herpetiforme. ve si no se diagnostica y trata adecuadamente.
4. Enfermedad celíaca colágena. Los pacientes con esprue celíaco tienen riesgo de
enfermedad maligna, con una tasa aumentada al
Diagnóstico do- ble de lo habitual.
Para hacer el diagnóstico del esprue celíaco, deben
estar presentes los elementos siguientes: Tratamiento
• Dieta sin gluten. Evitar todos los productos que
1. Existencia de signos de malabsorción.
en su composición tengan trigo, centeno, ceba-
2. Alteración en la biopsia del intestino delgado
da y avena, pastas alimenticias, la mayoría de
(yeyuno) que muestre lo ya descrito.
las conservas, pasteles y cerveza, y eliminar
3. Notable mejoría clínica, inmunológica e
todos los granos, excepto el arroz y el maíz.
histológica luego de la dieta sin gluten.
• Suprimir todos los disacáridos: leche y sus
Una de las características del esprue celíaco es deri- vados por espacio de 6 meses, que es el
que en el tiempo previsto después de suspender el tiempo en que el borde en cepillo de los
gluten de la dieta, las células absortivas vuelven a enterocitos se regenera.
su forma cilíndrica, reaparece el borde en cepillo, • Vitaminas y minerales: (ver “Tratamiento ines-
las vellosidades aumentan su longitud y disminu- pecífico”) para normalizar sus deficiencias.
yen la altura de las criptas y la infiltración celular de
la lámina propia. Los corticosteroides se han utilizado en:
1. Pacientes con esprue celíaco que mantienen
Evolución una dieta con gluten, con buena respuesta.
El 80 % de los pacientes se recuperan con la dieta 2. Casos de esprue rebelde que necesitan alimen-
sin gluten. La mejoría de los síntomas es cuestión tación parenteral o tratamiento con inmunosu-
de pocas semanas, no así las de las pruebas de fun- presores del tipo de la 6-mercaptopurina.
ción de absorción y de la histología del yeyuno, que
demoran varios meses.
Si el enfermo con esprue celíaco no mejora con
la dieta sin gluten, hay que hacer algunas considera- ESPRUE TROPICAL
ciones al respecto.
1. Que el diagnóstico no haya sido correcto y se
Concepto
trate de otra enfermedad: esprue tropical, Es una enfermedad causante de malabsorción, de
giardiasis. etiología no bien definida, que se ve en las
2. Que el enfermo no esté cumpliendo con la die- personas que viven o han visitado las regiones
ta indicada. tropicales (In- dia, Lejano Oriente, Caribe). Se
3. Que el paciente presente, además, insuficien- señala que el esprue tropical puede manifestarse
cia pancreática. meses o años después del regreso del enfermo de
4. Que tenga un déficit de lactasa, lo que provoca los trópicos. Etiología
una intolerancia a la leche.
Aún no se ha determinado el agente causal específico
5. Que esté presente alguna de las complicacio-
y se han planteado como posibilidades etiológicas:
nes ya mencionadas.
1. Infección bacteriana trasmisible.
Se debe señalar que hay un grupo pequeño de pa- 2. Déficit nutricional.
cientes con esprue celíaco que tienen una respuesta a 3. Posibles toxinas que estén en la dieta o sean
la dieta sin gluten muy demorada, y sólo mejoran al
elaboradas por las bacterias.
término de 24 a 36 meses.
277
El observar malabsorción unos días o semanas Evolución
después de una infección diarreica aguda apoya la Hay pacientes cuya respuesta es rápida, y la
causa infecciosa, a lo que se añade la rápida res-
glositis, la diarrea y la anemia desaparecen en
puesta al tratamiento antibiótico de amplio espectro.
pocas sema- nas con mejoría del estado nutricional;
En estos enfermos se han encontrado microrga-
en otros hay que mantener el tratamiento hasta 6
nismos coliformes en el yeyuno, que producen en-
meses para lo- grar resolver la enfermedad.
terotoxina, la cual origina secreción del líquido a
ese nivel. Tratamiento
Cuadro clínico La dieta debe ser rica en proteínas y pobre en gra-
sas. Hay que controlar la diarrea con derivados
Se describen dos fases, una inicial en que el pacien- opiá- ceos, corregir las deficiencias de
te tiene astenia y diarrea de intensidad variable, por vitaminas y minerales con vitamina B12 y ácido
el aumento en la eliminación de grasa fecal. Pasa-
das varias semanas, se observan las consecuencias fólico, y admi- nistrar antibióticos de amplio
espectro (ver “Trata- miento inespecífico y
de la malabsorción de varios nutrientes, en especial
ácido fólico y vitamina B12, además de las grasas. específico del SMA”).
Se añaden a los síntomas anteriores, los ya descritos
al principio del tema. Son raras las manifestaciones
de déficit de calcio y vitamina D. ENFERMEDAD
Exámenes complementarios DE WHIPPLE
En el esprue tropical están alteradas las pruebas de
absorción de grasa, xilosa y vitamina B12, ya expli- Concepto
cadas; la malabsorción de estas sustancias es impres- Es una enfermedad sistémica rara, que compromete
cindible para hacer el diagnóstico de la enfermedad. cualquier órgano de la economía, pero que afecta
Radiología intestinal. Se encuentra el patrón de sobre todo al intestino, SNC y articulaciones, y es
malabsorción. producida por un microrganismo de reciente identi-
Biopsia intestinal. Se detecta un mínimo acorta- ficación.
miento de las vellosidades y aumento de la profun-
didad de las criptas y de las células mononucleares Etiología
en la lámina propia y en el epitelio. A diferencia del En 1992 se identificó un actinomyces
esprue celíaco, las lesiones se encuentran en todo el grampositivo, al que se le llamó Tropheryma
intestino delgado. Las alteraciones antes descritas whippelii, como cau- sante de la enfermedad.
se han hallado en personas asintomáticas que viven
Cuadro clínico
en las mismas regiones tropicales que los enfermos,
lo que dificulta su interpretación. Esta afección se caracteriza por diarrea, esteatorrea,
Realmente los cambios que se observan son ines- dolor abdominal, anorexia importante con disminu-
ción de peso, y los síntomas carenciales ya
pecíficos, y el médico está obligado, antes de man-
descritos en el SMA. La pérdida intestinal de
tener el diagnóstico de esta afección en un paciente
proteínas es man- tenida sobre todo en presencia de
que haya venido de una región tropical, a descartar obstrucción linfá- tica por adenopatías
otras causas de malabsorción, tales como infesta- mesentéricas, por lo que se encuentra un edema
ción intestinal por parásitos, que producen un cuadro hipoproteinémico. La mayoría de los pacientes
de malabsorción con iguales cambios inespecíficos presentan una artritis no deformante, migratoria,
de la mucosa intestinal, como Giardia lambia en acompañada de signos inflamatorios; otros sólo
cualquier área geográfica y Capillaria phillipinensis tienen artralgias. La fiebre no es constan- te, ni
en la zona del Pacífico. muy alta, intermitente, pero puede ser conti- nua y
elevarse a medida que la enfermedad progresa, y se
señala que en ocasiones es el único síntoma
durante algún tiempo. Se describe la presencia en
algunos casos de poliserositis, que con la fiebre y
278
las diarreas, el cuadro simula a veces un linfoma o ficados como el actinomiceto grampositivo; se les
una tuberculosis intestinal. Se detectan adenopatías encuentra, además, en las células epiteliales y en
periféricas y como manifestaciones del SNC apare- los leucocitos polimorfonucleares. Luego del
cen confusión, pérdida de memoria, nistagmo y of- tratamien- to antibiótico, disminuyen o
talmoplejía. desaparecen los cuer- pos baciliformes, y así el
número de macrófagos PAS-positivo se reduce.
Exámenes complementarios En enfermos con SIDA se ha hallado ADN de T.
Relacionados con la malabsorción. Ponen en evi- whippelii en muestras de sangre.
dencia la esteatorrea, alteración de la D-xilosa, hi-
poalbuminemia y anemia. Evolución
Radiología intestinal. Hay un engrosamiento de Con un tratamiento antibiótico prolongado se obtie-
los pliegues del intestino, sobre todo del duodeno y ne una remisión completa, aunque en algunos pa-
yeyuno proximal. cientes la respuesta es lenta. Marca el control de la
Biopsia del intestino delgado. Las vellosidades enfermedad la ausencia de bacilos en los cortes de
aparecen engrosadas, con infiltración de la lámina las biopsias del intestino delgado.
propia por macrófagos cargados con gránulos PAS-
positivo. Estos macrófagos pueden encontrarse en Tratamiento
el cerebro, sinovia de las articulaciones afectadas, Sulfaprín (trimetoprín-sulfametoxazol): 500 mg c/6 h
ganglios linfáticos, bazo e hígado. Además, se ha-
por vía oral durante 1 año.
llan vasos linfáticos dilatados. Los macrófagos con-
No ha sido eficaz el uso de la tetraciclina o peni-
tienen bacilos en forma de bastoncillos, que se
cilina solas.
detectan al microscopio electrónico y están identi-

.
279
31
ENFERMEDAD
INFLAMATORIA
INTESTINAL
Concepto grado en la lámina propia de la pared intestinal
y mantienen la integridad de la mucosa.
Se denomina enfermedad inflamatoria intestinal
(EII) a un grupo de afecciones inflamatorias cróni- En la EC y en la CU, la búsqueda de la causa o
cas recidivantes, de causa desconocida, que afectan causas de la pérdida de este equilibrio, revela que
al tubo digestivo y que comprenden la enfermedad ambas enfermedades permanecen sin explicación, y
de Crohn (EC) y la colitis ulcerosa (CU). Solamente por tanto, se les clasifica como idiopáticas.
cuando estas enfermedades se localizan en el colon Seguida- mente se exponen los diferentes factores
tienen signos clínicos, radiológicos, endoscópicos e genéticos o familiares, infecciosos e inmunitarios,
histológicos comunes, y aunque comparten im- que tratan de explicar su origen.
portantes características fisiopatológicas, muestran
suficientes diferencias, como forma de afectar al es- Predisposición genética
pesor de la pared intestinal y distintas complicacio- Cada vez hay mayor evidencia de la predisposición
nes locales y respuestas a la cirugía, que justifican genética en el desarrollo de la EII, lo cual está
su consideración como dos enfermedades diferen- avala- do por la existencia de agrupaciones
tes. Alrededor de un 10 % de los casos no llegan a familiares, las diferencias de incidencia entre razas
distinguirse unos de otros y se les designa entonces y etnias, la com- probación de síndromes genéticos
como colitis indeterminada. con EII y por la asociación con marcadores
genéticos.
Epidemiología El índice de mayor riesgo es tener un familiar de
La EII se presenta en todo el mundo, con un predo- primer grado con EC o CU; esto alcanza un factor
minio en los países industrializados del mundo oc- de riesgo de 10. Aproximadamente un 15 % de
cidental, principalmente en el norte de Europa y en estos casos tienen un consanguíneo de primer
Norteamérica. grado con EII. Así, entre los familiares de pacientes
Afecta sobre todo a jóvenes adultos (15 a 35 años) con enfer- medad de Crohn, el peligro de
de ambos sexos, con vida urbana. padecer colitis ulcerosa es 8 a 10 veces mayor que
en la población general, y el de sufrir enfermedad
Etiología y patogenia de Crohn es 13 veces superior. Se observa un alto
El intestino normal está en un estado estacionario grado de concor- dancia en los gemelos
de inflamación “fisiológica”, dado por un equilibrio monocigotos, mayor en la EC que en la CU, lo que
dinámico entre: le confiere un papel más impor- tante a la herencia
en la primera.
1. Factores que activan el sistema inmunológico La más alta incidencia de EII se ve en la raza
del huésped, como los gérmenes en la luz in- caucásica, y dentro de ella, la etnia judía es la que
testinal, antígenos dietarios (proteína de la le- alcanza mayor porcentaje; es menor en la raza
che de vaca) y estímulos inflamatorios negra e inferior en la asiática.
endógenos. En la actualidad predomina la teoría de que la
2. Defensas del huésped, que regulan la presen- EII es un trastorno genéticamente heterogéneo
cia de una muy discreta inflamación de bajo definido por marcadores HLA tipo II y subclínicos
(anticuer- pos antineutrófilos citoplasmáticos
[ANCA]). Así se ha asociado la CU con el alelo
DR2 y con el marcador

283
subclínico ANCA, que es positivo en un 70 % de que promueve la expansión clonal de linfocitos T
los pacientes, y la EC con los alelos DR1/DQW5. citóxicos y aumenta la actividad de los T facilitado-
Anomalías estructurales de la mucosa intestinal. En res (helper) y linfocitos B. Así, pues, la respuesta
algunos pacientes (y sus consanguíneos) con EC hay inmunitaria mediada por células puede desempeñar
un aumento de la permeabilidad intestinal al un importante papel en la patogenia de la EII desde
polietilenglicol (PEG-400), y en enfermos con CU y su inicio.
miembros de su familia, se han encontrado altera- La colaboración entre linfocitos T facilitadores y
ciones en la mucina de las glucoproteínas, todo lo B, provoca un incremento en la producción de anti-
cual sugiere defectos intrínsecos en la estructura de cuerpos y un cambio en la proporción entre los dis-
la mucosa. tintos tipos de inmunoglobulina; se desplaza la
producción de IgA a IgM e IgG. Estas dos inmuno-
Causas infecciosas globulinas causan un aumento de la fijación del
La investigación actual sobre esta posible causa recae com- plemento a los complejos antígeno-
en el virus del sarampión, Lysteria monocytogenes anticuerpo, que desencadenan la liberación de
y la clamidia. Dada la gran semejanza de la EC con mediadores solubles de la inflamación, como
la enteritis granulomatosa de los rumiantes, o enfer- prostaglandinas, tromboxa- no y leucotrienos, los
medad de Johne, cuyo agente etiológico es Myco- cuales tienen un papel muy importante en el
bacterium paratuberculosis, se ha planteado la establecimiento del proceso infla- matorio.
posibilidad de que la EC esté causada por una En la EII existe un aumento de las citoquinas
micobacteria. Sin embargo, determinaciones muy proinflamatorias de gran significación (IL-1, IL-6,
sensibles de biología molecular no han puesto en IL-8), las cuales son proteínas mediadoras de fun-
evidencia el genoma micobacteriano en los tejidos ciones biológicas importantes, producidas la mayo-
afectados por esta enfermedad. Aunque aún no existe ría por los macrófagos activados de la lámina
la seguridad de que un agente infeccioso sea la cau- propia y, a su vez, la IL-1 y el FNT y el interferón
sa de la EII, estos antígenos pueden provocar una gamma estimulan las células epiteliales o
respuesta anormal del huésped. endoteliales y mesenquimales y tienen una
función reguladora de los procesos de cicatrización
Inmunorreactividad anormal del huésped y fibrosis.
Se produce una activación inapropiada del sistema
inmunológico intestinal por antígenos de la mucosa Inflamación es la vía final común de la patogenia
o la luz intestinal, ya sea a través de anomalías de de la EII
las células epiteliales de la mucosa intestinal en su Las manifestaciones clínicas de la EII y los
función como presentadoras de antígenos (teoría cambios morfológicos son el resultado de la
autoinmune), o de regulación anormal de la infor- activación de las células inflamatorias, con una
mación cruzada entre células inmunológicas de di- intensa infiltra- ción de neutrófilos en la mucosa
cha mucosa. del intestino al prin- cipio de la enfermedad y
En los pacientes con EII no hay alteraciones en la células mononucleares al final.
inmunidad sistémica, excepto en estadios avanza- La alteración de los neutrófilos en el intestino in-
dos, cuando existe desnutrición. flamado, provoca la aparición de gránulos de pro-
La lámina propia del intestino afectado por la en- teasas y un aumento en la producción de
fermedad está infiltrada por linfocitos, macrófagos superóxido y otras sustancias liberadoras de
y otras células del sistema inmunitario. Frente al an- radicales libres de oxígeno. Estos productos de los
tígeno, el primer paso en la respuesta corresponde neutrófilos activa- dos causan lesión hística
al macrófago y otras células presentadoras de antí- inespecífica. La inflama- ción ocasiona:
geno, que lo atrapan y luego lo procesan dentro del
compartimiento inmunitario intestinal. El macrófago 1. Daño a la barrera mucosa epitelial.
activado, además de presentar el antígeno a los lin- 2. Pérdida de la función absortiva de las células
focitos T, produce interleuquina 1 (IL-1), que activa superficiales del epitelio.
la célula T. El linfocito T activado produce IL-2, 3. Activación de la secreción de las células epite-
liales en las criptas.
284
La inflamación, con el tiempo, destruye la muco- mente. Hay quienes sugieren una asociación
sa inmediata, con lo que se pierde la barrera que negati- va entre el fumar cigarrillos y la CU. De
esta representa y la función de absorción. Todo esto hecho, las personas adultas que son fumadores
da lugar a la diarrea sanguinolenta intermitente ca- activos presen- tan una menor probabilidad de
racterística de estas enfermedades. desarrollar una CU que aquellas que no lo son. El
La mayor parte del tratamiento actúa a través de riesgo disminuye con el aumento del número de
la regulación inespecífica de la baja del sistema in- cigarrillos consumidos. En resumen, fumar hace
munológico, y dado los avances terapéuticos logra- que sea unas 10 veces me- nos probable padecer de
dos, las EII se han transformado en cuadros CU que el grupo de no fuma- dores.
susceptibles de alcanzar remisiones clínicas comple- Sin embargo, esta asociación no es justificante
tas y mantenidas, compatibles con una calidad de para propiciar dicho hábito, que tantos efectos
vida casi normal. deletéreos produce en la salud del hombre.
Anatomía patológica
Aspecto macroscópico
COLITIS ULCEROSA El aspecto macroscópico del colon afectado por
CU varía con la intensidad de la enfermedad. En
los ca- sos leves puede haber eritema y edema de la
Concepto muco- sa y, quizás, erosiones pequeñas. La
Es una inflamación de la mucosa del colon de causa inflamación empieza siempre distal en el recto y
desconocida, que puede afectar al recto y a la totali- se propaga en sentido proximal a distancia
dad del colon. Se caracteriza, anatomopatológica- variable. De ordinario, hay una demarcación clara
mente, por alteración de todas las paredes del colon, entre el colon afectado y el colon más proximal no
bien en algunas de sus capas o de todas ellas. Asi- afectado. No son raros los pólipos y seudopólipos
mismo, es constante en la evolución crónica, el cur- inflamados (Fig 31.1).
so por brotes y posibilidades de complicaciones leves
y graves. Se manifiesta, desde el punto de vista clí-
nico, por repetidos ataques de diarreas, retortijones,
dolores abdominales, rectorragias, fiebre, malnutri-
ción y alteraciones del estado general.
Epidemiología
Esta afección aparece principalmente en jóvenes y
adultos jóvenes.
Se dice que la CU presenta una incidencia anual
de unos 6 casos x 100 000 habitantes, lo que varía
según la raza y el área estudiada. La prevalencia es
irregular y oscila entre 24 y 122 casos x 100 000
habitantes. Casi todos los estudios epidemiológicos
coinciden en determinadas características socioeco-
nómicas; de ellas, existe un mayor porcentaje en los
judíos, raza blanca, en personas con mayor poder
adquisitivo y en áreas urbanas.
Al revisar varios estudios realizados entre 1930
y 1990, se demuestra que la incidencia según el sexo
ha variado en los últimos 50 años, lo cual parece
estar en relación con los cambios asociados al hábi-
to de fumar. La distribución por sexo ha pasado a
ser en la actualidad más frecuente en los varones Fig. 31.1. Colitis ulcerosa idiopática que muestra marcada
que en la mujeres, las que predominaban anterior- irre- gularidad de la mucosa, producida por las ulceraciones y
for- maciones seudopolipoides.
285
El colon con afectación crónica pierde sus plie- La intensidad de la diarrea es muy variable, des-
gues haustrales normales y toma un aspecto aplana- de 3 a 4 deposiciones al día hasta 1 o 2 por hora.
do. Cuando el daño es intenso, se observan áreas En los brotes leves las heces fecales son blandas,
grandes de ulceración y hemorragias. pastosas y formes, y aparecen líquidas y rojizas en
los casos de mayor gravedad. La presencia de moco
Aspecto microscópico y pus es frecuente; el primero se atribuye a la esti-
La lesión típica es el absceso de las criptas, que en mulación colinérgica de la mucosa inflamada y el
su forma completamente desarrollada se caracteriza
segundo, a la apertura de abscesos criptales a la luz
por la presencia de neutrófilos dentro de las criptas,
intestinal.
así como en la pared y en la lámina propia adyacen-
te. La lámina propia tiene infiltrados con número El dolor abdominal es común en estos pacientes,
creciente de mononucleares, lo cual indica cronici- sobre todo si la afectación colónica es extensa. Sue-
dad. Luego estos neutrófilos acaban siendo descar- le ser de tipo cólico, de predominio en hemiabdo-
gados hacia la luz del intestino o vuelven hacia la men izquierdo y en relación con las deposiciones.
lámina propia por destrucción hística continua, la Conforme evoluciona la enfermedad en el tiempo y
mucosa se erosiona y se llegan a formar verdaderas la fibrosis del colon aumenta progresivamente, di-
úlceras, lo que a su vez condiciona el inicio de un chos dolores tienden a disminuir. Por otra parte, en
proceso regenerativo epitelial. los casos graves, la presencia de un dolor intenso y
El proceso inflamatorio en la CU no siempre rom- continuo acompañado de defensa abdominal a la
pe la muscularis mucosae y sólo en los casos más ex- ploración, nos debe obligar a descartar la
graves se extiende hasta la submucosa. existencia de una perforación colónica.
Muchas veces los pacientes con CU refieren
Cuadro clínico otros síntomas gastrointestinales como: hiporexia,
El espectro clínico de la CU, muy amplio, es conse- pleni- tud, epigastralgia, náuseas y vómitos. Tales
cuencia de la diferente actividad inflamatoria y ex- sínto- mas son reflejos y su intensidad está en
tensión del proceso con los que se suele presentar. relación con la gravedad del brote. Aparecen
Típicamente ocurre en pacientes entre 20 y 50 años también astenia y pérdida de peso.
de edad y debuta como un ataque agudo fulminante La fiebre y la taquicardia indican por lo general
o sigue un curso indolente (asintomático), o crónico.
la presencia de un cuadro de cierta gravedad.
De modo general, las manifestaciones clínicas más
frecuentes y clásicas son la diarrea con sangre, moco
y pus en las heces fecales, aunque aparece también Exploración física
dolor abdominal, entre otros. Puede ser normal en los períodos de remisión e in-
La rectorragia es el síntoma inicial más común; cluso en los brotes leves de la enfermedad. Sin em-
se observa mucha sangre en el papel higiénico o bien bargo, en los casos de mayor afectación se constata
aparece moco sanguinolento que cubre las heces, la repercusión general con signos de
lo cual en ocasiones es atribuido a la presencia de deshidratación, anemia y desnutrición en mayor o
hemorroides, sobre todo si éste se acompaña de es- menor grado.
treñimiento (que se debe a un espasmo del rectosig- De forma ocasional, el hígado es palpable por in-
moide). filtración grasa u otra anormalidad hepática conco-
A medida que se incrementa la gravedad del cua- mitante.
dro, con afectación más amplia del colon, surge la La auscultación del abdomen suele revelar
diarrea, que se debe a la presencia de un componente
ruidos hidroaéreos aumentados y borborigmo
secretor y exudativo que aumenta la disolución de
audible.
las heces fecales, y a una inadecuada reabsorción
de sodio y agua por parte de la mucosa colónica. El examen rectal es usualmente doloroso y el es-
La irritabilidad rectal causa evacuaciones intesti- fínter anal es con frecuencia espástico. El examina-
nales frecuentes, con cantidades pequeñas de sangre dor debe ser hábil para percibir grietas y cambios
y moco, lo que se denomine seudodiarreas. granulares en la mucosa rectal a la palpación
digital. Los seudopólipos pueden ser palpados y la
rigidez rectal, detectada.
286
Una buena exploración física también ayuda a Electrólitos en sangre: Hipocalcemia e
hallar datos que orienten hacia la existencia de com- hipomag- nesemia.
plicaciones, tanto locales como sistémicas. Fosfatasa alcalina: Aumentada como manifesta-
Formas clínicas ción de colangitis esclerosante.
En dependencia de la gravedad de la enfermedad, Heces fecales: El examen directo muestra abun-
hay 3 formas clínicas: dantes hematíes, leucocitos, moco y piocitos.

1. Severa. Incluye 6 o más diarreas en el día, Endoscopia


sanguinolentas; fiebre mayor de 38ºC, frecuen- Rectosigmoidoscopia. Estudio de gran valor para
cia cardíaca mayor de 90 latidos/min, anemia, hacer el diagnóstico de certeza de la enfermedad,
eritrosedimentación > 30 mm/h, hipoalbumi- que según su grado de actividad se clasifica en:
nemia menor de 3 g/dl. Esta forma puede ha-
cer su aparición ya en el primer brote o en el • Quiescente. Patrón vascular mucoso normal o
transcurso de cualquier recidiva. distorsionado. Fina granularidad.
2. Moderada. Aquí hay 4 o menos diarreas en el • Leve o ligeramente activo. Hiperemia o eritema
día, con poca cantidad de sangre en las heces; focal o difuso. Friabilidad (sangramiento al
no fiebre ni taquicardia, anemia discreta y eri- con- tacto).
trosedimentación ligeramente acelerada. Cursa • Moderado o moderadamente activo. Exudado
por brotes o períodos de actividad de duración mucopurulento. Úlceras simples o múltiples, pe-
limitada, que oscilan entre 4 y 6 semanas, y queñas (< 5 mm) y en número menor de 10 por
alternan con otros de latencia o inactividad, si segmento de 10 cm.
bien a veces la enfermedad se mantiene activa • Severo. Hemorragias espontáneas. Úlceras
durante períodos de tiempo superior a los 6 gran- des (> 5 mm) y en número mayor de
meses, incluso años. 10 por segmento de 10 cm.
3. Ligera. El paciente sólo tiene de 2 a 4 diarreas
en el día, sin sangre visible; ausencia de fiebre, Colonoscopia. Tiene las siguientes indicaciones:
anemia, taquicardia, pérdida de peso o hipoal-
buminemia y eritrosedimentación normal. 1. Diagnóstico diferencial entre la CU y la EC.
2. Diagnóstico diferencial entre la EII y otras
Según la extensión de las lesiones, se distinguen for- mas de colitis.
también 3 formas de presentación: 3. Valoración de hallazgos radiológicos (esteno-
1. Proctitis ulcerosa (o hemorrágica). La infla- sis y masas).
mación queda limitada a la mucosa rectal. 4. Valoración de la extensión de la enfermedad.
2. Rectocolitis ulcerosa (o hemorrágica). La in- 5. Seguimiento de la displasia epitelial o del cán-
flamación se extiende desde el recto hasta la cer colorrectal.
porción izquierda del colon transverso. 6. Seguimiento de la respuesta al tratamiento
3. Pancolitis. El proceso inflamatorio abarca todo mé- dico.
el colon e incluso algunas veces existe toma
ileal (ileítis por reflujo). Imagenología

a) Rx simple de abdomen. Debe hacerse siempre,


Exámenes complementarios particularmente en la colitis severa, donde el
Hemograma: Anemia por déficit de hierro, y leuco- riesgo de megacolon tóxico existe. Puede de-
citosis con desviación izquierda en los casos com- mostrar acortamiento o pérdida de haustrass y
plicados. aire suficiente en un segmento del colon.
Eritrosedimentación: Acelerada. b) Colon por enema. Está indicado en todo enfermo
Proteínas plasmáticas: Hipoalbuminemia con in- con CU, pero sólo en el momento apropiado,
versión del índice serina-globulina. pues puede precipitar la aparición de
megacolon tóxico. Las alteraciones
radiológicas varían con
287
la localización de las lesiones y el estado de la así como el ensanchamiento presacro como
enfermedad. Los hallazgos principales suelen ser: consecuencia de la retracción de las paredes
1. Ausencia de pliegues entre las haustras. del recto a dicho nivel.
2. Irregularidades del contorno de la mucosa,
que aparece con aspecto dentellado. Biopsia: El estudio histológico de la mucosa del
3. Pliegues polipoides (Fig 31.2). colon da el diagnóstico definitivo de la enfermedad
4. Ulceraciones. y está indicada en todos los cuadros que hagan sos-
5. Retracciones del órgano. pechar una CU.

Diagnóstico diferencial entre la colitis


ulcerosa y la enfermedad de Crohn
Enfermedad de Crohn Colitis ulcerosa
I. Criterios macroscópicos.
1. Enfermedad segmentaria. 1. Enfermedad continua.
2. Preservación rectal. 2. Afectación rectal.
3. Mucosa ulcerada o en 3. Mucosa granular.
empedrado.
4. Presencia de fisuras. 4. Ausencia de fisuras.
5. Vascularización discreta. 5. Hipervascularización.
6. Extensión transversal. 6. Extensión hasta la submu-
cosa.
7. Serositis. 7. Serosa normal.
8. Fístulas enterocutáneas 8. Ausencia de fístulas.
o intestinales.
II. Criterios radiológicos.
1. Afectación asimétrica 1. Afectación continua desde
y discontinua. el recto.
2. Afectación aislada del 2. Afectación difusa del recto.
colon derecho.
3. Úlceras profundas longi- 3. Mucosa granular.
tudinales o transversales.
III. Criterios endoscópicos.
1. Presencia de lesiones 1. Ausencia de lesiones anales.
anales.
2. Recto preservado. 2. Recto afectado.
3. Dibujo vascular 3. Hiperemia de la mucosa.
preservado.
4. Mucosa no friable. 4. Mucosa friable.
5. Imágenes de “empedrado”.5. Ausencia de “empedrado”.
Fig. 31.2. Colitis ulcerosa idiopática. En el colon por enema se 6. Úlceras serpiginosas o 6. Úlceras superficiales.
observan defectos de lleno correspondientes a las formaciones aftoides.
polipoides de la enfermedad. 7. Mucosa lisa. 7. Mucosa granular.
8. Lesiones discontinuas. 8. Lesiones continuas.
c) Examen contrastado con aire y enema de ba-
rio. Es útil para determinar la extensión y la Evolución
actividad de la enfermedad, la presencia de La mejor manera de comprender la evolución de
cáncer o para diferenciarla de la EC es- tos enfermos, es a través del conocimiento de
d) TAC. La CU es una entidad que afecta funda- las formas clínicas de la enfermedad, según
mentalmente la mucosa del colon, sin embar- Bockles:
go, en determinadas circunstancias el proceso
inflamatorio abarca todo el grosor de la pared I. Forma recidivante.
intestinal y puede ser evaluado mediante este 1. Variedad leve.
estudio. Se ha mostrado útil en la detección de 2. Variedad grave.
la extensión de la afectación perirrectal al se- • Con remisión clínica y endoscópica.
ñalar el engrosamiento de la pared intestinal, • Con remisión clínica, pero persistiendo
las lesiones endoscópicas.
288
• Ambas formas pueden transformarse en
crónica continua o bien presentar una re-
cidiva tipo fulminante.
II. Forma crónica continua.
III. Forma fulminante.
La forma recidivante es la más frecuente, funda-
mentalmente su variedad leve, que por lo común
cursa con escasa repercusión general, sin fiebre,
duración aproximada de 4 a 12 semanas y con afec-
tación por lo general distal (recto o sigma). Está tam-
bién la variedad grave, en la que es habitual encontrar
un cuadro clínico más intenso con fiebre, toxemia e
importantes pérdidas hemáticas. Dentro de esa va-
riedad se encuentran 2 subgrupos: 1 y 2.
En la forma crónica continua existe persistencia
de la sintomatología durante 6 meses o más, a pesar
del tratamiento médico. Suele afectarse el recto
sigmoide y de manera ocasional todo el colon. El
cuadro clínico incluye todos los grados de grave-
dad, y por lo común la sintomatología es fluctuante.
Con el tiempo aparece un deterioro progresivo del Fig. 31.3. Megacolon tóxico por administración de opiáceos a
un paciente con colitis ulcerosa idiopática. Nótese, además de
colon afectado, con fibrosis, acortamiento y rigidez, la gran dilatación, el aspecto afelpado y la rigidez de las pare-
y hay una mayor incidencia de complicaciones. Su des del colon, así como la ausencia de haustras.
respuesta terapéutica es muy pobre y casi todos los
pacientes requieren cirugía. 3. Fístulas rectovaginales.
La forma fulminante es muy poco frecuente. Cur- 4. Prolapso rectal.
sa con un cuadro clínico de instauración brusca (días) 5. Hemorroides.
y está precedido por abundantes diarreas, hiperpi- 6. Fisuras anales.
rexia, toxemia y deficiencias nutritivas. El colon se 7. Perforación del colon.
encuentra afectado en su totalidad en la mayoría de 8. Hemorragia masiva.
los casos, está dilatado y con múltiples ulceraciones 9. Estenosis del colon.
penetrantes que amenazan perforación inminente o 10. Cáncer del colon.
megacolon tóxico. Necesita tratamiento médico in- II. Extraintestinales
tensivo precoz e indicar cirugía urgente si su efec- 1. Dermatológicas.
tividad no ha sido rápida. a) Eritema nudoso.
b) Pioderma gangrenoso.
Complicaciones c) Eritema multiforme.
A lo largo de su evolución, la CU se acompaña de 2. Reumatológicas.
diversas complicaciones de distinta significación, a) Artritis periférica.
tanto clínica como pronóstica. En primer lugar, cabe b) Espondilitis anquilopoyética.
distinguir las que acontecen en el mismo colon o c) Sacroileítis.
por extensión directa a partir de éste, y las llamadas 3. Hematológicas.
complicaciones sistémicas o extraintestinales. a) Anemia hemolítica autoinmune.
b) Anemia por déficit de hierro, B12 y ácido
I. Locales fólico.
1. Megacolon tóxico (Fig. 31.3). 4. Oftalmológicas.
2. Abscesos perianales. a) Artritis periférica.

289
b) Uveítis. • Desarrollo de complicaciones locales o
c) Iritis. sistémi- cas que incluyen: hemorragias
5. Cardiovasculares. masivas, anemia persistente, hipoalbuminemia
a) Pericarditis. severa y cáncer.
b) Miocarditis.
6. Hepatobiliares. Medidas generales
a) Colangitis esclerosante. Debe asegurarse una dieta equilibrada con
b) Carcinoma de las vías biliares. suplemen- tos vitamínicos, y en caso de anemia,
añadir huevo, ácido fólico o ambos.
Por ser el megacolon tóxico una de las complica- La alimentación parenteral se indica ocasional-
ciones más temidas de la CU, pues pone en peligro mente en la CU, en caso de malnutrición o de
la vida del enfermo, se relacionan a continuación prepa- ración para la cirugía, ya que no se ha
los elementos necesarios para establecer su diagnós- demostrado que ésta disminuye la actividad
tico: inflamatoria.
La pérdida crónica de potasio, sodio y agua de-
Signos de toxicidad: ben reponerse con líquidos por vía oral o EV, en
1. Fiebre mayor de 38,6ºC. dependencia de la gravedad de la enfermedad, ya
2. Taquicardia mayor de 120 latidos/min. que el déficit de líquidos y electrólitos puede estar
3. Leucocitosis mayor de 100 000/ mm3 (> 100 . implicado en el desarrollo de megacolon tóxico.
109/L). La pérdida de sangre debido a la enfermedad se-
4. Anemia menor del 60 % de la cifra normal. vera debe ser repuesta con transfusiones.
5. Hipoalbuminemia menor de 30 g/L. En la afección ligera está indicada la administra-
(Se requieren 3 de los anteriores indicadores para ción oral de hierro.
hacer el diagnóstico.)
Tratamiento medicamentoso
Signos asociados: Los medicamentos utilizados en el tratamiento de la
1. Deshidratación. CU pertenecen a diferentes grupos farmacológicos.
2. Confusión mental. 1. Aminosalicilatos.
3. Hipotensión arterial. • Sulfasalazina.
4. Disturbio electrolítico. • Olsalazina.
(Se requiere 1 de los anteriores indicadores para • Mezalasina.
hacer el diagnóstico.) 2. Corticosteroides.
• Hidrocortisona.
Signos de dilatación:
• Prednisona.
Diámetro del colon mayor de 6 cm o distensión pro-
• Metilprednisolona.
gresiva con patrón haustral anormal. • Budesonida.
3. Inmunosupresores.
Tratamiento • Azatioprina.
El tratamiento de la CU tiene varios pilares y de- • 6-mercaptopurina.
pende del grado e intensidad de la enfermedad, así • Ciclosporina.
como de la forma de presentación de ésta. • Metotrexate
4. Antibióticos.
Hospitalización • Ciprofloxacino.
La hospitalización está indicada en varias situa-
ciones: Aminosalicilatos. La sulfasalazina (azulfidina)
• Fracaso del tratamiento en la enfermedad ligera. fue el primer medicamento que resultó eficaz en el
• La CU severa. tra- tamiento de la CU, sobre todo en las formas
leves, moderadas y en la prevención de recidivas.
Se utili- za en dosis de 1 g diario, por vía oral, que
se aumen- ta gradualmente hasta 4 o 6 g diarios.
290
Está compuesta por sulfapiridina y ácido 5-ami- Cortimet (acetato de hidrocortisona, 10 mg +
nosalicílico (5-ASA). base oleosa, 40 mg).
Es el 5-ASA el que permanece en la luz del co- Entocort 0,02 mg/ ml (budesonida enema).
lon, donde ejerce su acción terapéutica local antes Preparados sistémicos: En la enfermedad panco-
de eliminarse por las heces. No se conoce con exac- lónica de ligera a moderada debe usarse la
titud su mecanismo de acción. predni- sona, 40 mg/día, de inicio. En los casos
Por los efectos adversos que producía el compuesto severos, los pacientes requieren hospitalización
sulfamídico fundamentalmente, se investigaron nuevos y esteroides EV
transportadores inertes del 5-ASA, por lo que en el (prednisona, 40 mg/día). Hay que tener en cuenta
momento actual se utilizan resinas protectoras pH los efectos colaterales de los corticoides, lo cual
dependientes, como la mesalazina, la cual se usa por está relacionado con la dosis y duración del
vía oral o rectal, en dosis de 500 mg c/12h. tratamiento. Inmunosupresores. La azatioprina y su
Existen otras formas de presentación, que se em- metabolito activo, la 6-mercaptopurina, se han
plean por vía oral, como: confirmado como tratamiento a largo plazo de la
Salazopyrin 4 g/día EII y como
Asacol 4 g/día “ahorradores de corticosteroides”. En los pacientes
Mesacol 4 g/día corticodependientes tienen como inconveniente que
Salofalk 4 g/día tardan unos 4 a 6 meses en producir la respuesta
Dipentum 2 g/día terapéutica. Actúan inhibiendo la síntesis del ADN
Pentasa 4 g/día en los linfocitos y, por lo tanto, disminuyen la célula
T con sus efectos citotóxicos. Suelen ser bien
Corticosteroides. Son muy útiles en el tratamien- tolera- das en las siguientes dosis.
to de la CU en fase activa y actualmente el grupo Azatioprina: 2 a 2,5 mg/kg/día.
medicamentoso más efectivo para reducir la infla- 6-metcaptopurina: 1 a 1,5 mg/kg/día.
mación en la fase aguda. Su mecanismo de acción Estos medicamentos producen depresión
es complejo. Actúan en varios niveles de la respues- medular, por lo tanto, se debe controlar
ta inmunitaria inhibiendo la producción y acción de mensualmente su uti- lización durante los primeros
las citoquinas y de los mediadores de la inflama- meses y luego cada 3 meses.
ción. Disminuyen las diarreas por aumento en la ab- La ciclosporina tiene una acción inmunosupresora
sorción de agua y sodio, y causan la bien conocida más potente y más rápida, y por vía EV se ha mos-
sensación de bienestar. trado efectiva en las formas graves y agudas de la
El ACTH y la hidrocortisona se utilizaron en un CU, como en el megacolon tóxico, a razón de 4 mg/kg.
principio, pero por retener sodio y líquido, producir No está comprobada su eficacia por vía oral para
HTA y alcalosis hipoclorémica, fueron casi total- indu- cir o mantener la remisión de las formas
mente sustituidos por los glucocorticoides sintéti- crónicas. Antibióticos. Aunque no está demostrada
cos, como la prednisona y 6-metilprednisolona. En
su efecti- vidad, éstos también se utilizan en los
la actualidad se están ensayando nuevas moléculas
casos gra- ves con signos peritoneales. El
esteroideas, como la budesonida, fluticortisolona y
ciprofloxacino se está empleando en CU
pivolato de texacortal, que tienen mayor potencia
refractaria, en la dosis de 20
de inhibición del edema y más afinidad por los re-
ceptores glucocorticoides. a 30 mg/kg/día, repartidos cada 12 h.
Se ha demostrado la efectividad de los corticos- Tratamiento de las formas específicas
teroides en la administración oral, parenteral o rec- de CU
tal, tanto en la CU como en la EC. Proctitis
Preparados rectales: La base fundamental del tratamiento es la medica-
Cortenemas (hidrocortisona, 100 mg + suspen- ción tópica con derivados 5-ASA y corticosteroides
sión acuosa, 60 mg). en forma de enema, supositorio o espumas.
Cortifort (acetato de hidrocortisona, 80 mg + Formas leves y moderadas. Mesalazina, 1 suposi-
gel de propilenglycol). torio de 500 mg c/8 o 12 h durante 2 o 3 semanas y
se disminuirá la dosis progresivamente. En caso de
intolerancia a la vía rectal, se puede utilizar la vía
291
oral con sulfasalazina o un compuesto de 5-ASA, o Se considera que existe corticodependencia cuando
un corticoide rectal, 2 veces al día, combinado con los enfermos necesitan dosis mayores de 15 mg/día
tratamiento sistémico. de prednisona durante 6 meses para mantener la re-
Formas graves o refractarias. Habrá que añadir misión clínica y en los que al intentar retirarla, al
prednisona o similar por vía oral. En el primer epi- menos en dos ocasiones, reaparecen los síntomas.
sodio de proctitis con rápida respuesta, no está indi- En estos casos se valora la cirugía o se utiliza la
cado el tratamiento de mantenimiento, ya que los medicación inmunosupresora, como la azatioprina
pacientes pasan mucho tiempo en remisión y en los o la 6-mercaptopurina. Otras drogas que se pueden
casos de recidiva por lo común responden bien a la usar son el metotrexate o el ciprofloxacino, los
medicación. deri- vados del aceite de pescado (ácido
eicosapentanoico) y las nuevas moléculas
Colitis izquierda o pancolitis esteroideas, como la bu- desonida.
Si el enfermo presenta síntomas rectales, se utiliza-
rán preferentemente los enemas de 1 g de mesalazina; Tratamiento quirúrgico
también se usa la vía oral con sulfasalazina, Aproximadamente entre 20 y 25 % de los pacientes
olsalazina o mesalazina, en dosis creciente hasta al- con CU requieren una colectomía durante la evolu-
canzar la máxima, que se mantendrá 1 o 2 meses, ción de su enfermedad. Ésta tiene las siguientes in-
para luego disminuirla de forma progresiva. dicaciones:
En caso de falta de respuesta o en las formas gra-
ves, se empleará la prednisona o equivalente, en la Electivas:
dosis de 40 o 60 mg durante 10 días, que luego se 1. Enfermedad crónica continua grave.
reducirá de manera progresiva. 2. Afectación masiva del colon.
3. Sospecha o existencia de adenocarcinoma.
Colitis grave o fulminante 4. Complicaciones locales: estenosis y fístulas.
El paciente debe ser hospitalizado, vigilado clínica- 5. Complicaciones graves de la enfermedad.
mente y controlado por el laboratorio para prevenir 6. Retraso en el desarrollo (niños).
las complicaciones. Se indicará hidratación paren-
teral, calculada según el estado del enfermo. Urgentes:
1. Fallo en el tratamiento médico en los ataques
Transfusión eventual para mantener el hemató-
agudos graves.
crito por encima del 30 %.
Se suprimirán los anticolinérgicos, antidiarreicos
De emergencia:
y narcóticos, pues cuando la mucosa del colon está 1. Empeoramiento muy rápido del estado ge-
severamente dañada, éstos son por lo general inefec- neral.
tivos por haber pérdida de la capacidad de absor-
2. Megacolon tóxico, sobre todo cuando no me-
ción; además, los anticolinérgicos pueden precipitar
jora después de 72 h con tratamiento intensivo.
la aparición de megacolon tóxico, por lo que deben
3. Sospecha o existencia de perforación.
ser proscriptos.
4. Hemorragias masivas.
Está indicada la prednisona, 40 o 60 mg por vía
EV, o también ACTH 80, 120 U por vía EV. Estos La proctocolectomía total con ileostomía perma-
se administrarán de preferencia en los pacientes que nente, ha sido el tipo de intervención habitual de
no recibieron corticosteroides en el mes previo, ya casi todos los pacientes sometidos a colectomía. Se
que en ellos parece obtenerse mejor respuesta. han utilizado abordajes alternativos, como la
anastomosis ileorrectal y actualmente se realiza la
Colitis refractaria y colitis corticodependiente anastomosis ileoanal.
Existe un grupo de pacientes corticorrefactarios, que
a pesar del tratamiento correcto en dosis plena, con- Pronóstico
tinúan en actividad, valorada ésta clínica, endoscó-
En la CU aguda se producen remisiones casi en un
pica y anatomopatológicamente, durante más de 3
90 % de los casos, como respuesta al tratamiento
meses.
con corticoides y sulfasalazina. La mortalidad del
292
brote agudo inicial es de un 5 %, y aumenta en pre- En EUA su incidencia anual es de 1 a 3 por 100 000
sencia de factores de mal pronóstico. habitantes, un poco menos frecuente que la CU.
El pronóstico a largo plazo en la CU crónica es Se presenta en cualquier edad, desde niños pe-
queños hasta personas de edad avanzada, con un
más difícil de valorar, dado el curso variable e inter-
mitente de la enfermedad y los avances actuales en pre- dominio entre los 15 y 30 años, y es un poco
su tratamiento. menos frecuente en los decenios sexto y séptimo.
Las mujeres se afectan más que los hombres.
Se ha comprobado que los fumadores tienen el
ENFERMEDAD doble de riesgo de padecer la EC. Las posibilidades
de desarrollar complicaciones, como abscesos y
DE CROHN fís- tulas, en las mujeres fumadoras con EC, llega a
ser 4 veces mayor. Los fumadores de más de 10
cigarri- llos por día tienen doble riesgo de necesitar
Concepto cirugía a los 10 años y con más recurrencias que
La EC, también llamada enteritis regional, es un pro- los no fu- madores.
ceso crónico, recidivante, de causa desconocida, que
se caracteriza por una inflamación transmural de la
Anatomía patológica
pared de cualquier parte del tracto gastrointestinal, El íleon terminal es la parte que más se afecta (50
desde la boca hasta el ano, con inclusión del mesen- % de los casos) en la EC, y se extiende al colon
terio y de los ganglios linfáticos adyacentes. Por lo proxi- mal en un 25 %.
general, las lesiones son discontinuas, segmentarias, La localización cólica aislada se ve en un 20 %
separadas por áreas interpuestas indemnes (“saltos”), de los casos, y el resto, 5 %, en los sitios poco co-
y afectan sobre todo al íleon terminal, colon y ano, munes: los segmentos proximales (boca, esófago,
aislado o combinadamente. Esta enfermedad se ca- estómago y duodeno) y asas aisladas de yeyuno.
racteriza por un curso variable, manifestaciones clí- La EC se caracteriza por:
nicas diversas, complicaciones sistémicas y 1. Afección transmural con proceso inflamatorio
perianales, y por una tendencia a recurrir después bien delimitado del intestino, con daño de la
de la resección quirúrgica. mucosa.
2. Presencia de granulomas no caseosos entre
Historia un 50 y 70 % de los casos.
En 1761, Morgagni describió el primer caso compa- 3. Fisuras con formación de fístulas.
tible con el concepto actual de EC. Es en 1932 que
Crohn, Ginzburg y Oppenheimer consideran a la La serosa presenta aspecto granular y color gris
enteritis regional como un cuadro crónico de fiebre, intenso en los segmentos enfermos. La pared intes-
dolor abdominal y diarreas, unido al hallazgo anato- tinal es gruesa, por el edema, inflamación, fibrosis
mopatológico en el íleon terminal de estenosis, en- e hipertrofia de la muscular propia, por lo que la
grosamiento y formación de fístulas hacia otras luz casi siempre se estrecha. Una característica
vísceras abdominales. funda- mental de esta enfermedad es la notable
delimita- ción de los segmentos intestinales
Epidemiología enfermos, que intercalan con zonas de pared
intestinal normal, le- siones discontinuas o lesiones
Se distribuye en todo el mundo, con una prevalen-
a “saltos”.
cia de 10 a 70 x 100 000 habitantes, pero es más
Al inicio hay en la mucosa intestinal úlceras
frecuente en EUA, Gran Bretaña y países escandi-
focales iguales a las gangrenosas (“úlceras aftosas”),
navos que en Europa central, y es rara en Asia, Áfri- edema y pérdida de la textura normal.
ca y Sudamérica. Al avanzar la enfermedad, las ulceraciones evo-
Durante los últimos 40 años, la incidencia y la lucionan:
prevalencia han ido aumentando hasta alcanzar una
meseta seguida de un descenso en los últimos 10 años. a) Crecen en sentido lateral y coalescen con
úlceras adyacentes, para formar otras lineales
y largas.
293
b) Crecen también en profundidad y penetran en gado. En más del 50 % de los pacientes hay fiebre,
la pared intestinal, incluso hasta los tejidos ve- que persiste días o semanas, y no sobrepasa los 38 ºC,
cinos; causan fisuras profundas (úlceras excepto que haya complicaciones locales sépticas.
“fisurarias”) y en algunos casos llegan a for- A veces es el único signo de la enfermedad. En la
mar abscesos “fisurarios”. fase avanzada, la pérdida de peso es notable.
Estos síntomas con frecuencia comienzan de for-
La presencia de zonas edematosas e inflamato- ma insidiosa, pero en algunos casos, sobre todo en
rias delimitadas por úlceras lineales, dan a la muco- los jóvenes, el inicio del dolor es tan brusco e
sa un aspecto macroscópico de “suelo empedrado”. inten- so y la diarrea tan leve, que simula una
Estas fisuras pueden alcanzar la porción más exter- apendicitis aguda. En los de afectación colónica,
na de la pared, sobrepasarla y dar origen a las fístu- las diarreas, en número de 3 o 4 o más por día,
las en órganos o tejidos vecinos. En ocasiones se son blandas o líquidas, con moco o pus; aparecen
producen también perforaciones libres. rectorragia y sín- tomas anales causados por fisuras
En el examen microscópico la mucosa presenta tórpidas, fístulas y abscesos perianales, que en
varias características: ocasiones anteceden a los síntomas abdominales.
1. Inflamación, con infiltración de neutrófilos en Éstos consisten en dolor de carácter cólico
la capa epitelial; luego éstos invaden las crip- generalizado o de localización periumbilical, o en
tas hasta el epitelio y forman pequeños absce- el hipogastrio o en ambas fosas ilíacas; hay pérdida
sos en su luz. de peso en relación con la dura- ción y la extensión
2. Ulceración, como expresión de la enfermedad de la enfermedad.
activa. El signo clínico más característico es la palpa-
3. Daño crónico a la mucosa dado por deforma- ción en la fosa ilíaca derecha de una masa alargada,
ción de la estructura, atrofia y metaplasia. consistente y dolorosa, que corresponde al íleon
ter- minal engrosado por la inflamación
Los granulomas se presentan en cualquier parte transmural. Es frecuente detectar las fisuras,
del tubo digestivo, aunque su ausencia no excluye abscesos o fístulas perianales, lo cual depende de
el diagnóstico de esta enfermedad. la localización, in- tensidad de la inflamación y
La muscularis mucosae y la muscular propia de evolución de la afec- ción.
los segmentos afectados suelen estar engrosadas y En los casos de enfermedad crónica recidivante,
la fibrosis afectar todas las capas de tejido. predomina el dolor abdominal posprandial de tipo
En los pacientes con enfermedad crónica prolon- cólico, náuseas, vómitos y estreñimiento, lo que su-
gada se observan, en las células epiteliales de la giere un cuadro de obstrucción intestinal, reversible
mucosa, cambios displásicos, focales o extendidos, cuando lo produce la inflamación, e irreversible
que aumentan con el tiempo y se relacionan con un cuando la fibrosis y la estenosis están presentes.
riesgo 5 o 6 veces mayor de aparición de carcino- La malnutrición y la malabsorción con su conse-
ma, sobre todo del colon. cuente pérdida de peso, es habitual en todas las for-
mas de EC. Varios son los factores responsables de
Cuadro clínico
esto; no obstante, la disminución voluntaria de la
Las manifestaciones clínicas son muy variables y la ingestión de alimentos por miedo a la exacerbación
mayoría de las veces guardan relación con la locali- de los síntomas abdominales es la primera causa de
zación del proceso. Cuando está afectado el íleon pérdida de peso (cuadro 31.1).
terminal, domina el cuadro el dolor en la fosa ilíaca
derecha o en el hipogastrio, de tipo cólico, irradiado Formas clínicas
al mesogastrio, acompañado de diarreas pastosas o
semilíquidas en número de 2 a 6 al día, sin sangre La EC puede presentarse adoptando distintas for-
macroscópica, a menos que exista afectación mas clínicas.
colónica concomitante. 1. Aguda apendicular. Hay dolor en la fosa
Las heces pueden ser esteatorreicas en los casos ilíaca derecha, diarreas, náuseas, vómitos y
crónicos con importante afectación del intestino del- fiebre, y simula en un 20 % un cuadro de
apendicitis aguda. Se corresponde con
afectación apen-
294
CUADRO 31.1 megaloblástica por déficit de folatos y de vitami-
MECANISMOS RESPONSABLES
DE LA MALABSORCIÓN
na B12; hay leucocitosis cuando el proceso inflama-
Y MALNUTRICIÓN EN LA EC torio está en actividad.
Inadecuada ingestión de alimentos. Anorexia. Eritrosedimentación. Está acelerada.
Restricción específica de alimentos para evitar las diarreas y
Electrólitos en sangre. Se detectan hipocaliemia
el dolor abdominal.
Inflamación del intestino delgado. e hipomagnesemia.
• Disminución de la absorción de nutrientes. Calcio sérico. Está disminuido.
• Deficiencia adquirida de disacaridasa. Proteínas plasmáticas. Hay hipoalbuminemia.
• Enteropatía perdedora de proteínas. Fosfatasa alcalina. Está aumentada como reflejo
• Deficiencia de hierro debida a pérdida crónica de
sangre. del desarrollo de una esteatosis hepática en los
Sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado de- pa- cientes malnutridos o de una colangitis
bido a estenosis y fístulas. esclerosante
• Malabsorción de cobalamina. inicial.
• Metabolismo de las sales biliares alterado y malab-Endoscopia. Debe realizarse primero que el exa-
sorción de las grasas.
Cirugía intestinal.
men radiológico, con tubos flexibles para poder ob-
servar directamente la mucosa y descubrir sus
• Pérdida de área de superficie absortiva debido a re-
sección. cambios morfológicos, y obtener muestras para
• Resección ileal: causa malabsorción de cobalamina,
exa- men histológico. Dado que entre las
deficiencia de sales biliares y esteatorrea.
características de la EC está la presencia de áreas
Diarrea.
• Pérdida de líquidos y electrólitos. respetadas y de un recto normal, la colonoscopia
• Combinación de los factores anteriores. puede ser mejor que la sigmoidoscopia para su
estudio. Está contra- indicada en el megacolon
tóxico y la perforación, y desaconsejada en los
dicular de la EC en el 50 % de los casos, con la brotes graves.
participación ileal o colónica adyacente.
2. Aguda oclusiva. La EC suele diagnosticarse en LESIONES ENDOSCÓPICAS EN LA EC
la intervención quirúrgica por un cuadro de obs-
trucción intestinal. Se debe a la estenosis in- • Afectación perianal.
• Presencia frecuente de fístulas.
testinal por inflamación transmural. • Recto indemne en la mayoría de los casos.
3. Diarreica clásica. Es la más frecuente. Las • Ulceraciones aftoides o profundas, longitudinales en
diarreas, en número de 3 o 4 al día, son pasto- el colon, de forma segmentaria.
sas en las formas ilíacas, o acuosas y con san- • Mucosa normal entre lesiones ulceradas.
gre en la afectación colónica; además, hay dolor • Aspecto en “empedrado” de la mucosa.
abdominal difuso de tipo cólico, o de predomi- • Seudopólipos.
• Afectación del íleon terminal.
nio en la fosa ilíaca derecha, y fiebre poco ele-
vada. Esteatorrea en la afectación difusa del
intestino delgado. Imagenología
4. Forma tumoral. Se detecta una masa alargada, a) Colon por enema. Al principio de la enferme-
dolorosa, en la fosa ilíaca derecha, con diarrea dad suele ser normal. Los hallazgos principa-
y dolor abdominal intermitente. les son:
5. Forma febril. En ocasiones es el único signo 1. Indemnidad del recto en la mayoría de los
de la enfermedad. Se comporta como una fie- casos.
bre de origen desconocido. 2. Edema de la mucosa.
3. Pequeñas ulceraciones en pequeños nódulos
Exámenes complementarios irregulares.
Hemograma. Existe anemia, microcítica hipocrómi- 4. Mucosa intestinal preservada.
ca si solamente hay déficit de hierro, o macrocítica 5. Úlceras longitudinales y fisuras transversa-
les (fístulas limitadas).
6. Aparición de fístulas.
7. Presencia de estenosis.
8. 10 a 15 % con afectación de todo el colon.
295
b) Examen contrastado de aire y enema de bario. ción, las plaquetas, la proteína C reactiva y el
En un colon bien preparado puede mostrar las orosomucoide, principalmente este último, tienen
primeras alteraciones de la mucosa. una buena correlación con la actividad de la EC.
c) Tránsito intestinal o el reflujo de bario hacia Otro índice indirecto de actividad de la EC se
el íleon durante un colon por enema. Expone basa en la valoración de la exudación proteica por
las alteraciones ileales características de la EC la pa- red intestinal afectada, mediante la
del intestino delgado: determinación fecal de la alfa 1-antitripsina y su
1. Pérdida de los detalles de la mucosa. aclaramiento plas- mático. También se puede
2. Rigidez de los segmentos afectados por el cuantificar el grado de exudación midiendo en las
edema submucoso o por la estenosis. heces la radiactividad de los leucocitos marcados
3. Separación entre las asas intestinales. con InIII-oxina.
4. Ulceraciones de la mucosa. Con la endoscopia se determina, además, el gra-
5. Patrón en “empedrado” de la mucosa por la do de actividad de la EC (cuadro 31.2).
inflamación de la submucosa.
6. Distribución discontinua y asimétrica de las
CUADRO 31.2
lesiones, excepto en el íleon terminal, don- VALORACIÓN ENDOSCÓPICA
de la afectación es de forma simétrica y con- DE LA ACTIVIDAD DE LA EC
tinúa dando origen al signo de la cuerda.
7. Fístulas, sobre todo en la región ileocecal. d) Actividad Aspecto
Radiografía de esófago, estómago y duodeno. Quiescente Patrón mucoso vascular normal o
Muestra las alteraciones siguientes: distorsionado.
Granularidad.
1. Úlceras y estenosis en el esófago. Leve Eritema focal o difuso.
2. Rigidez e infiltración de la mucosa del estó- Moderada Aftas o pequeñas ulceraciones de menos
mago y duodeno, lo cual simula un tumor de 5 mm y en número mayor de 5 por
infiltrante. cada segmento de 10 cm.
Severa Grandes y múltiples ulceraciones de más
e) TAC. Es la técnica más utilizada para el estu- de 5 mm y en un número mayor de 5
dio de las complicaciones dentro de la cavidad por cada segmento de 10 cm.
peritoneal, tales como los abscesos y las fístu-
las. Mediante ella se puede valorar el engrosa-
miento y la separación de las asas adheridas Diagnóstico
(flemón) de un absceso intrabdominal. Diagnóstico positivo
f) RMN y, más recientemente, la ecoendoscopia. El diagnóstico de EC debe sospecharse en todos los
Tienen gran valor para el diagnóstico de las pacientes con diarrea, con sangre o sin ella, sepsis
complicaciones perianales. perianal persistente y dolor abdominal. La colonos-
copia y la radiología confirmarán la sospecha clínica.
Gammagrafía con granulocitos marcados con
isótopos (Tc99, indio [In.III]). Técnica altamente es-Diagnóstico diferencial
pecializada que se utiliza para determinar la exten- El diagnóstico diferencial hay que hacerlo con dis-
sión de las zonas afectadas y el grado de actividad tintas enfermedades en dependencia de la zona
inflamatoria. afec- tada.
Biopsia. El estudio histológico de la mucosa de Colitis aguda infecciosa. Hay diarrea sanguino-
las áreas afectadas del intestino, da el diagnóstico lenta, con dilatación del colon. La biopsia rectal
definitivo de la enfermedad. muestra infiltración por polimorfonucleares con
ede- ma marcado y conservación de las criptas.
Diagnóstico humoral y endoscópico de la actividad Debe te- nerse en cuenta que una exacerbación de la
de la EC EC puede deberse a una colitis infecciosa
Se han valorado diversas pruebas de laboratorio, superpuesta.
sobre todo los reactantes de fase aguda, para cuanti- Colitis seudomembranosa (colitis asociada a los
ficar la actividad inflamatoria. La eritrosedimenta- antibióticos). La produce una toxina necrolítica elabora-
da por Clostridium difficile. La diarrea es profusa y
acuosa, y en un 5 % de los casos va acompañada de
296
sangre. En la sigmoidoscopia se observan placas CUADRO 31.3
múltiples amarillentas que en la biopsia muestran COMPLICACIONES DE LA EC
una inflamación aguda y ulceración, con una
Locales
seudomembrana de fibrina y material necrótico. Colitis Anorrectales o enfermedad perianal:
isquémica. Existe dolor abdominal asocia- do a • Fisura anal.
hemorragia rectal, sobre todo en personas de • Fístulas del ano.
• Úlcera anal.
edad avanzada, con alteraciones radiológicas • Absceso perianal.
carac- terísticas y edema o hemorragia Megacolon tóxico.
submucosa (hue- llas dactilares), que se resuelven Perforación aguda.
en varias semanas. Síndrome del intestino Estenosis intestinal.
irritable. La sigmoidosco- pia, la biopsia rectal y Obstrucción del intestino delgado.
el enema opaco son norma- Fístulas y abscesos.
Cáncer del colon.
les. El diagnóstico histológico es definitivo.
Extraintestinales
Para diferenciar la EC de la colitis ulcerosa, Articulares:
ver CU. • Artralgia periférica, migratoria.
En caso de afectación del intestino delgado (en- • Espondilitis anquilosante seronegativa.
teritis regional), el diagnóstico diferencial debe ha- Cutáneas:
• Eritema nudoso.
cerse con las enfermedades que se acompañan de • Pioderma gangrenoso.
fístulas, obstrucción intestinal y malabsorción. • Ulceraciones aftosas bucales.
Linfoma abdominal. Presenta características clí- Oculares:
nicas y radiológicas que pueden ser difíciles de dis- • Conjuntivitis.
• Iritis, uveítis y episcleritis.
tinguir de la enteritis regional. Ayuda cuando Enfermedades hepatobiliares:
aparecen la hepatosplenomegalia y las adenopatías • Colelitiasis.
periféricas. Suele ser necesaria una laparotomía para • Hepatitis crónica activa.
llegar a un diagnóstico histológico definitivo. Renales:
Infección fúngica crónica del intestino (aspergi- • Nefrolitiasis.
Trombosis venosas y tromboembolia
losis y blastomicosis). Se observan en pacientes con (Hipercoagulabilidad, deshidratación, estasis.)
deterioro de sus defensas. Las pruebas cutáneas fún- Otras:
gicas y el material de biopsia de los granulomas ca- • Amiloidosis.
racterísticos y hongos, sirven de ayuda para llegar
al diagnóstico. Medidas generales
Tuberculosis intestinal. Produce lesiones estenó- • Informarle al paciente la naturaleza de su
ticas situadas en el íleon terminal, con frecuente afec- enfer- medad y la necesidad de permanecer
tación del ciego y el colon ascendente. Son raras las bajo con- trol médico periódico de por vida.
áreas indemnes. En el estudio histológico la infla- • Ofrecerle apoyo psicológico.
mación granulomatosa de la tuberculosis es distin-
Medidas dietéticas
guible de la que se ve en la enteritis regional; deben
La alimentación debe ser adecuada para mantener
hacerse tinciones y cultivos para bacilos ácido-al-
un buen estado nutritivo. Los pacientes en fase de
cohol resistentes.
quiescencia no deben ser sometidos a restricción
Complicaciones alimentaria alguna; en cambio, en la fase de activi-
dad moderada es recomendable una dieta
Las complicaciones de la EC se relacionan en el hipercaló- rica e hiperproteica evitando los
cuadro 31.3. alimentos ricos en fibras o estimulantes de la
motilidad intestinal. En los enfermos en fase de
Tratamiento actividad severa, hay que suspender toda ingestión
Los objetivos primordiales del tratamiento de la EC oral e indicarle alguna de las modalidades de
son obtener la remisión de los brotes lo antes posi- nutrición artificial, para así man- tenerle en reposo
ble y evitar las recidivas. el tubo digestivo.

297
Los avances en la técnica de alimentación paren- Antibióticos. El metronidazol es el antibiótico
teral, han permitido proporcionar a los enfermos un más utilizado en la EC. Su acción no sólo es
aporte calórico diario total intravenoso durante se- antibacte- riana, sino también inmunosupresora a
manas e incluso meses. En los casos de amplia afec- través de la inhibición de la inmunidad celular, la
tación del intestino delgado o en pacientes con formación de granulomas y la quimiotaxis de los
intestino corto por resecciones extensas, se les indi- neutrófilos.
ca un suplemento de electrólitos, minerales y vita- Es eficaz en los pacientes con la EC localizada
minas. En presencia de diarreas provocadas por en el colon y en la forma perianal. Puede producir
alteraciones de la absorción de las sales biliares, se una neuropatía periférica sensitiva que obliga a
administra colestiramina, así como una dieta con bajo suspen- der el medicamento.
contenido en grasa (40 o 50 g/día) y triglicéridos de Estos fármacos han demostrado su eficacia para
cadena media para reducir la malabsorción de las reducir la inflamación, pero no para curar la enfer-
grasas. Si existe un déficit de lactasa asociado, se medad.
indica una dieta sin lactasa.
Tratamiento según la intensidad del ataque
Tratamiento medicamentoso Ataque leve de EC
Los medicamentos utilizados en el tratamiento de la Tratamiento inicial:
EC son los siguientes: Sulfasalacina: 3 a 5 g /24 h, por vía oral, en 3 o 4
Aminosalicilatos. Actualmente se utilizan más los tomas, o
preparados de 5-ASA (ácido aminosalicílico), como 5-ASA (ácido aminosalicílico): 1,5 a 3 g/24 h,
la mesalamina. por vía oral, en 3 tomas.
Corticosteroides. Se usan como tratamiento de Con estos medicamentos se logra la remisión clí-
elección en los brotes moderados y severos de EC. nica hasta en el 40 % de los pacientes tratados du-
Inmunosupresores. La azatioprina y su metabolito rante 12 a 16 semanas.
activo, la 6-mercaptopurina, son los inmunosupre- Tratamiento de mantenimiento:
sores más empleados en la EC. Se indican en la lo- Sulfasalacina: 3 a 5 g/24 h, por vía oral, en 3 o 4
calización colónica de la enfermedad, en la EC tomas, o
corticodependiente, en la refractaria al tratamiento 5-ASA (ácido aminosalicílico): 1,5 a 3 g/24 h,
esteroideo, en la enfermedad fistulosa y para man- por vía oral, en 3 tomas.
tener la remisión clínica lograda con los esteroides. Durante 6 meses, si el primer brote es indefinido
Tanto los corticoides como estos inmunosupreso- res o si la EC es recidivante.
tienen un efecto tardío (3 meses los primeros y 6 los Si hay refractariedad:
segundos), por lo que no debe darse por fracasa- da Prednisona o derivados: 20 o 40 mg/24 h/vía
la terapéutica con su empleo antes de ese tiempo. La oral, o dosis equivalente, en dosis única matinal.
ciclosporina es un fármaco inmunosupresor que
interfiere con la proliferación de los linfocitos T Ataque moderado de EC
cooperadores, linfocitos B y la liberación de cito-
Tratamiento inicial:
quinas de manera reversible y dosis dependiente.
Sulfasalacina: 3 a 5 g/24 h, vía oral en 3 o 4 to-
Puede ser efectiva en la EC severa y refractaria al
mas, o
tratamiento anterior expuesto, así como en el pio-
5-ASA 1,5 a 3 g/24 h, vía oral en 3 tomas, más
derma gangrenoso. Su acción es rápida, y se obtiene
Prednisona o derivados: 40 a 60 mg/24 h, vía
respuesta en 1 o 2 semanas. El gran inconveniente
oral o dosis equivalente.
de este medicamento es su incapacidad para mante-
Tratamiento de mantenimiento:
ner la remisión a largo plazo, aun con dosis plenas,
Sulfasalacina: 3 a 5 g /24 h por vía oral, o
aunque la induzca de manera rápida y potente. El
5-ASA: 1,5 a 3 g/24 h por vía oral.
metotrexate es un antimetabolito antagonista del
En caso de refractariedad:
ácido fólico con propiedades antinflamatorias y ha
Sulfasalacina: 3 a 5 g/24 h, o
estado reservado en esta enfermedad para ensayos
5-ASA: 1,5 a 3 g/24 h, más
terapéuticos.
Prednisona o derivados: 60 a 80 mg/24 h (vía
oral), o
298
Sulfasalacina: 3 a 5 g/24 h, por vía oral, o metrodinazol, 20 mg/kg/día. Si en 2 meses no hay
5-ASA: 1,5 a 3 g/24 h, por vía oral, más respuesta o empeora, administrar azatioprina o 6-
Metilprednisolona: 1 mg/kg/24 h, por vía oral. mercaptopurina.

Ataque severo de EC Enfermedad perianal


Tratamiento inicial: Se utiliza el metronidazol en dosis de 20
Sulfasalacina: 3 a 5 g/24 h, por vía oral, o mg/kg/día, en varias tomas. No se debe prolongar
5-ASA: 1,5 a 3 g/24 h, por vía oral, más este trata- miento más de 4 meses. Como
Metilprednisolona: 1 mg/kg/24 h, por vía oral. alternativa se utiliza el ciprofloxacino en la dosis de
Tratamiento de mantenimiento: 500 mg c/12 h.
Sulfasalacina: 3 a 5 g/24 h, por vía oral, o En la enfermedad perianal grave y resistente se
5-ASA: 1,5 a 3 g/24 h, por vía oral. pueden ensayar los inmunosupresores.
Se pueden emplear también los corticoides.
En caso de refractariedad: Tratamiento quirúrgico
Azatioprina: 2 mg/kg/24 h (toma única), o Alrededor del 70 % de los pacientes con EC requie-
6-mercaptopurina: 1,5 mg/kg/24 h (toma única), ren cirugía. La extirpación quirúrgica del intestino
o delgado o del grueso, va seguida de un elevado
Ciclosporina: 4 mg/kg/24 h, EV, en infusión con- por- centaje de recidivas; éstas se producen
tinua, o 5 a 7,5 mg/kg/24 h, en 2 tomas, o siempre en sentido proximal a la anastomosis.
Metotrexate: 25 mg/sem (vía IM).
INDICACIONES QUIRÚRGICAS DE LA EC SEGÚN
SU LOCALIZACIÓN
Se ha demostrado que los pacientes con enferme-
dad cólica activa tienen buena respuesta a la sulfa- Ileocólica
salazina. Los glucocorticoides son eficaces, aunque • Obstrucción intestinal.
• Fistulización, abscesos o ambos.
menos que en los casos de afectación del intestino • Enfermedad perianal muy grave.
delgado. Intestino delgado
La respuesta al tratamiento es menos completa que • Obstrucción intestinal.
en la CU y la enfermedad progresa aunque no exista • Fistulización, abscesos o ambos.
actividad clínica evidente. Dado que los aminosali- Cólica
cilatos y los glucocorticoides no mantienen la remi- • Megacolon tóxico.
sión de la EC, una vez superada la fase de actividad • Fistulización.
• Estenosis con obstrucción.
se aconseja en la actualidad la retirada progresiva
• Enfermedad perianal muy grave.
de toda la medicación. Otras
El tratamiento de la EC del intestino delgado es • Hemorragia grave.
similar al de la enfermedad cólica. • Retraso del crecimiento.
La obstrucción intestinal en los pacientes con EC • Malnutrición grave.
lineal por lo común es secundaria a la inflamación • No respuesta al tratamiento médico.
aguda y responde a los corticoides. Cuando se han
producido varias recidivas y se ha desarrollado El porcentaje de recidivas es menor cuando se
fibrosis, es necesaria la intervención quirúrgica. hace una colectomía total con ileostomía por EC
En la EC aguda, grave, con frecuencia considera- del colon, sin afectación importante del intestino
da colitis indeterminada, el tratamiento es similar al delga- do, y oscila entre el 10 y 30 %.
de la CU grave, fulminante, con corticosteroides en Se han logrado buenos resultados con el
dosis altas por vía EV. De no responder, en centros metroni- dazol en la dosis de 20 mg/kg/día durante
selectivos se le indica ciclosporina EV en la dosis 3 meses, en la prevención de las recurrencias
de 4 mg/kg/día. posoperatorias después de la resección ileal, pero
aunque las re- currencias se redujeron durante un
Fístulas año, este benefi- cio no se mantuvo a los 2 y 3
Si el riesgo de la cirugía es alto, se inicia el trata- años.
miento médico de las fístulas entero-entéricas con También se han comunicado efectos similares
con la mesalamina en dosis de 2 a 4 g/día.

299
Pronóstico la calidad de vida son la presencia de recidivas y la
No es tan favorable como en la CU. Una excepción necesidad de cirugía.
es la enteritis regional aguda, descubierta en una La recurrencia de la enfermedad es muy frecuen-
laparotomía por posible apendicitis; en este caso, el te tras una primera intervención quirúrgica, de
pronóstico es excelente. modo que a los 10 años de ésta la EC recurre en la
En la mayoría de los enfermos la evolución es mitad de los casos, y a los 15 años, en 90 %. La
crónica e intermitente, independiente de su locali- afección reaparece alrededor de la zona de la
zación. En el 85 % de los pacientes a los 10 años de anastomosis. La mortalidad debida a la enfermedad
evolución, la calidad de vida laboral y social es bue- es de alrede- dor del 10 % a los 10 años de
na. Los factores que influyen de forma negativa en evolución.
300
32
CÁNCER DE COLON Y RECTO
Concepto Epidemiología
El cáncer del colon es el tumor que se desarrolla El carcinoma colorrectal se distribuye de manera
por degeneración maligna de las células del intesti- amplia en todo el mundo; las tasas más elevadas de
no grueso, desde la válvula ileocecal hasta la flexu- incidencia se observan en Estados Unidos, Canadá,
ra rectosigmoidea; desde esta última hasta el ano se Nueva Zelanda, Dinamarca, Suecia y otros países
denomina cáncer del recto. desarrollados. Su frecuencia es sustancialmente baja,
hasta 30 veces menos, en India, Sudamérica y Áfri-
Frecuencia ca. La incidencia en Japón, antes muy baja, se ha
elevado ahora hasta los niveles intermedios que se
El cáncer colorrectal es considerado el tumor más observan en el Reino Unido.
común del tubo digestivo en los países industriali-
zados y muestra una curva de frecuencia ascenden- Etiología
te. En relación con su localización dentro del propio Aunque es imposible establecer una relación abso-
órgano, su incidencia es mayor en el recto que en el luta entre el cáncer colorrectal y los factores etioló-
colon, y en éste se presenta más en el lado izquier- gicos que más frecuentemente se señalan, ciertas
do que en el derecho. alteraciones patológicas relacionadas con la heren-
El cáncer de colon y recto surge habitualmente a cia y deficiencias inmunitarias predisponen a su
partir de la edad media de la vida. La máxima inci- apa- rición, así como algunos agentes físicos,
dencia se observa en el grupo de edad de 60 a 70 alteraciones funcionales y los hábitos alimentarios
años; menos del 20 % ocurre antes de los 50. Predo- relacionados con el marco geográfico.
mina en el hombre si se localiza en el lado izquierdo En los tumores del colon la herencia parece
del colon, mientras que cuando aparece en el lado desem- peñar un papel más importante que en otras
derecho, la incidencia es igual para ambos sexos; locali- zaciones. La predisposición genética a
padecerlo se observa en pacientes con poliposis
en general, el cáncer colorrectal afecta a los hom-
familiar, y en al- gunas familias aparecen varios
bres con una frecuencia de 20 % más que a las
miembros afectados; se acepta que ello ocurre con
mujeres. una frecuencia doble que la normal, pero también
Ocupa, en relación con todos los tumores malig- pueden intervenir fac- tores ambientales y no
nos, el tercer lugar en frecuencia para el sexo masculi- genéticos.
no y el segundo, para el femenino; en cuanto a la Los estados de deficiencia inmunitaria, que influ-
mortalidad, el tercer lugar para ambos sexos. yen sobre todos los órganos, parecen ser más
Un paciente portador de un cáncer colorrectal impor- tantes en el colon. La colitis ulcerosa y
parece estar predispuesto a presentar un segundo o granulomatosa predisponen evidentemente al
un tercer carcinoma sincrónico, es decir, que coin- cáncer. Otras enfer- medades benignas, como los
ciden en el tiempo; esto se observa en el 1 a 4 % de pólipos y el adenoma velloso, son elementos de
los enfermos, situación parecida a la que ocurre con estímulo neoplásico más que factores
los metacrónicos, o sea, los que aparecen después predisponentes.
de una lesión primaria curada. Cuando se encuentra un cáncer colorrectal en
una persona joven, debe sospecharse colitis ulcerativa
pre- existente o algún síndrome de poliposis. La
lesión

301
precursora es un adenoma; todavía no se conoce con conocimientos profundos de los mecanismos gene-
precisión si este cáncer pueda originarse a partir de rales de la carcinogénesis.
mucosa plana. Poliposis adenomatosa coli. El defecto heredita-
La flora intestinal es esencial para el proceso de rio subyacente a los síndromes de poliposis adeno-
carcinogénesis. Se ha demostrado que los enfermos matosa familiar y síndrome de Gardner se ha
con carcinoma del intestino grueso tienen elevadas “mapeado” sobre el cromosoma 5g21, donde se
concentraciones de sales biliares fecales, de manera iden- tifica el gen supresor de tumor de poliposis
específica, ácido desoxicólico, por interferencia en adeno- matosa coli. Se cree que la proteína
su mecanismo de reabsorción. modificada participa en la adhesión hística. La
La alimentación es un factor que se debe tener en mutación de la poliposis adenomatosa coli es
cuenta en la presentación de esta enfermedad. Las también un aconteci- miento inicial en la evolución
personas de alimentación escasa en residuos, es de- del cáncer esporádico del colon.
cir, preferentemente proteica, grasa e hidrocarbona- Secuencia adenoma-carcinoma. La presentación
da, con poca proporción de celulosa (fibra vegetal) de carcinoma a partir de lesiones adenomatosas se
y de micronutrientes protectores (vitaminas A,C y E) conoce como secuencia adenoma-carcinoma y la
—como ocurre en las poblaciones de los países oc- comprueban las siguientes observaciones (Fig. 32.1):
cidentales—, tienen mayor proporción de carcino-
ma colorrectal. Esta alimentación lleva a una menor 1. Las poblaciones con más alto índice de adeno-
masa fecal y a una mayor lentitud en el tránsito in- mas tienen mayor prevalencia de cáncer co-
testinal, es decir, que habrá más concentración y lorrectal y viceversa.
mayor tiempo de acción de cualquier carcinógeno 2. La distribución de los adenomas del colon y
derivado de este tipo de dieta. Actualmente esta teo- recto es más o menos comparable con la del
ría es la más aceptada. cáncer colorrectal.
En resumen, si los factores genéticos e inmuno- 3. La edad de la incidencia máxima de los
lógicos desempeñan un papel importante en la etio- pólipos adenomatosos, precede por algunos
logía del cáncer de colon y recto, parece existir un años a la edad de incidencia máxima del
proceso multifactorial que condiciona los cambios cáncer co- lorrectal.
degenerativos malignos inducidos por carcinogénos 4. Cuando se identifica un carcinoma invasivo
exógenos o endógenos. Común a todos los factores en etapa inicial, con frecuencia se observa
mencionados es el tiempo prolongado de exposición tejido adenomatoso alrededor.
5. El riesgo de cáncer se relaciona de manera di-
del carcinógeno a la mucosa intestinal. Patogenia
recta con el número de adenomas y de ahí la
En casi todos los carcinomas colorrectales se encuen- certeza virtual de cáncer en pacientes con sín-
tran alteraciones genéticas, cuyo estudio suministra dromes de poliposis familiar.
6. Los programas de seguimiento persistente de
enfermos para detectar el surgimiento de ade-
Colon normal Mucosa de riesgo Adenoma Carcinoma

Mucosa

Submucosa

Muscular
propia
Mutaciones en la línea Anomalías de la Mutación de Pérdida Mutaciones adiciona-
germinal (hereditaria) o metilación. protoncogenes. homocigótica les, alteraciones
somática (adquirida) de Inactivación de de los genes cromosómicas groseras
los genes supresores de alelos normales. supresores de en muchos genes.
cáncer. “Segundo golpe”. cáncer
Son genes reparadores de adicionales.
incompatibilidades.
“Primer golpe”.
Fig. 32.1. Esquema de los cambios moleculares y morfológicos de la secuencia adenoma-carcinoma.

302
nomas y retirar todos los identificados, redu- tomar la vejiga, los anejos, el hígado, el estómago,
cen la incidencia del cáncer colorrectal. el páncreas, el bazo, el intestino delgado, el mesen-
terio, el riñon, los uréteres, etc.
Cambios musculares y morfológicos en la secuen- Microscópicamente, el 95 % de los cánceres
cia adenoma-carcinoma. Se postula que la pérdida colorrectales son adenocarcinomas mucosecretores.
de una copia normal del gen supresor de cáncer, APC, En la unión anorrectal pueden formarse tumores
y la pérdida de genes reparadores de ADN son los epidermoides o cánceres cloacogénicos. De forma
hechos iniciales. En realidad, los individuos pueden infrecuente se encuentran en el colon metástasis de
nacer con el alelo mutante que los hace muy suscep- otras neoplasias, sobre todo de mama, pulmón o de
tibles a padecer de cáncer del colon. Es decir, en el un hipernefroma.
colon normal ocurren mutaciones en la línea
germinal (hereditaria) o somática (adquirida) de los Vías de diseminación
genes supresores de cáncer y la pérdida de genes Las vías de diseminación más frecuentes son la lin-
reparadores de incompatibilidades. Éste es el “pri- fática (alrededor del 50 % de los casos presentan
mer golpe”. A continuación, en la mucosa de riesgo afectación ganglionar en el momento del diagnósti-
hay pérdida de la copia normal de APC o MSH2. co); la hematógena (por lo general con metástasis
Ocurren anomalías de la metilación e inactivación hepáticas y más raramente pulmonares, cerebrales
de los alelos normales. Éste es el “segundo golpe”. y óseas) y la propagación por contigüidad a
De inmediato, en el adenoma tiene lugar mutación órganos vecinos, que origina una carcinosis
de los protoncogenes y pérdida homocigótica de los peritoneal.
genes supresores de cáncer adicionales, lo que con- La diseminación linfática es la más común, por
diciona finalmente la aparición del carcinoma, en el lo que es importante conocer la rica red linfática
cual ocurren mutaciones adicionales con alteracio- del colon. Los plexos submucosos y subserosos
drenan hacia los glanglios linfáticos epicólicos,
nes cromosómicas burdas.
situados por detrás del peritoneo y a lo largo de
Anatomía patológica todo el trayecto colónico; estos ganglios desaguan
en los interme- dios, localizados en el trayecto
Alrededor del 25 % de los carcinomas se localizan de las arterias nutricias del colon; la linfa se
en el ciego o en el colon ascendente, y una propor- dirige entonces hacia los ganglios principales junto
ción similar en el recto y el sigmoide distal. Otro 25 % a las arterias mesenté- ricas, desde donde, por
se sitúa en el colon descendente y sigmoide proxi- intermedio de las cadenas ileolumbares, llega al
mal; el resto se encuentra disperso en otras partes. conducto torácico. Sin embar- go, esta
Es evidente que su localización más frecuente es en diseminación no es forzosamente escalona- da,
el sigmoide y recto, donde alcanza las dos terceras sino que suelen haber grupos ganglionares
partes del total. saltados, sin colonización neoplásica.
Macroscópicamente adopta la forma vegetante o La diseminación por vía sanguínea ocurre en
polipoidea (en general en el colon derecho) y anular el 20 % de los casos a través de las venas cólicas, y
o escirroso (en el colon izquierdo). por vía portal se producen las metástasis hepáticas.
El cáncer comienza a extenderse en el propio in- La diseminación peritoneal, por simple despren-
testino en forma circunferencial y tarda aproxima- dimiento celular o por siembra dentro de la
damente 6 meses en invadir cada cuarto de cavidad, lleva a la carcinomatosis generalizada. En
circunferencia, de tal modo, que al año ya ha toma- estos ca- sos, las células anidan muchas veces en la
do la mitad. Esto es mucho más evidente en el colon pelvis y en el fondo de saco de Douglas, y entonces
izquierdo, dado su menor diámetro. Avanza en sen- pueden detectarse masas tumorales por tacto
tido proximal y distal por la submucosa y la red linfá- rectal o ginecológico, elemento diagnóstico
tica parietal, pero rara vez se extiende más de 5 cm fundamental y
proximal y distal al tumor. Una vez tomada la sub- sencillo de practicar.
mucosa, la muscular y luego la serosa, la propaga- La diseminación intraluminal, es decir, el
implante de células distalmente al tumor, ocurre,
ción se hará hacia las estructuras vecinas. Así, podrá
aunque es raro. Por ello es necesario, durante una
operación de exé- resis, hacer ligaduras previas
intestinales, tanto distales como proximales.
303
Fisiopatología y cuadro clínico friables, que sangran de manera lenta y progresiva
Desde el punto de vista anatómico, el intestino grueso y se ulceran con facilidad, lo cual propicia
se divide en colon y recto. El colon se extiende des- infección local y pericolitis, que evoluciona como
un proceso inflamatorio que en algunos casos llega
de la válvula ileocecal hasta la unión rectosigmoidea.
a la absce- dación y más raramente se perfora y
El colon derecho comprende: ciego, colon ascen-
determina un cuadro de abdomen agudo
dente, ángulo derecho o hepático y la mitad derecha
peritonítico. Este mismo proceso de ulceración
del transverso. Embriológicamente se deriva del in-
crea las condiciones para la infección exógena,
testino medio, recibe su irrigación de la arteria me-
cambios de la flora intestinal y manifestaciones
sentérica superior y drena su sangre a través de la dispépticas, como son las diarreas. El cáncer del
vena mesaraica mayor; su diamétro es más grande colon izquierdo es morfológicamente anular,
que el del colon izquierdo y sus paredes más delga- escirroso, de tipo estenosante, lo cual unido a las
das, su función es absorbente y el contenido intesti- características anatómicas y fisiológicas refe-
nal es líquido a ese nivel. El colon izquierdo ridas, provoca que las manifestaciones de oclusión
comprende la mitad izquierda del transverso, ángu- intestinal sean las predominantes en estos pacien-
lo izquierdo o esplénico, colon descendente y el tes, la cual suele evolucionar como obstrucción in-
sigmoide. Desde el punto de vista embriológico de- completa o completa; esta última origina un cuadro
riva del intestino posterior, recibe su irrigación de la clínico de abdomen agudo. El tumor localizado en
arteria mesentérica inferior y drena su sangre a tra- este sitio puede sangrar y ocasionar una verdadera
vés de la vena mesaraica menor; su diámetro es enterorragia, por estar más próximo al ano, o ulce-
menor que el del colon derecho y sus paredes mus- rarse y originar un cuadro toxinfeccioso inflamato-
culares más gruesas, sus funciones son de almace- rio, o crecer lo suficiente para manifestarse como
namiento y excreción de las materias fecales sólidas. una masa palpable de tamaño variable, cuya
Las manifestaciones clínicas del cáncer del colon movili- dad depende de su localización en el
dependen de su localización en el lado derecho o hemiabdomen
izquierdo (Fig. 32.2), no sólo por las diferencias izquierdo.
anatómicas y fisiológicas referidas, sino porque el En resumen, el cáncer del colon derecho adopta
tumor adopta características diferentes. las formas clínicas siguientes: tumoral, inflamato-
ria, anémica y dispéptica, y el del colon izquierdo:
obstructiva, hemorrágica, inflamatoria y tumoral. En
Colon derecho
(intestino medio)
Colon izquierdo los períodos finales de la enfermedad, se añaden
(intestino posterior)
de- posiciones mucosanguinolentas, astenia,
anorexia, pérdida de peso, que con frecuencia
llevan al enfer- mo a la caquexia.
El médico debe pensar en cáncer de colon y recto
Dolor Sangramiento,
ante los hechos siguientes:
Dolor Dolor obstrucción
1. Cambios en el hábito intestinal. Períodos de
Dispepsia, diarreas que alternan con constipación. Heces
anemia,
masa palpable
acintadas.
Sangramiento, tenesmo
Dolor 2. Dolor al defecar, trastornos abdominales va-
gos, exageración de la peristalsis.
Fig. 32.2. Sintomatología del colon derecho y del izquierdo.
(Tomado de Tratado de Patología Quirúrgica de D. Sabiston, 3. Sangre en el recto, deposiciones mucosangui-
Ed. Interamericana, 10a ed.) nolentas o enterorragia.
4. Anemia, pérdida de peso progresiva sin causa
Cuando está localizado en el colon derecho, a aparente.
veces transcurre largo tiempo sin dar manifestacio- 5. Tumoración en el hemiabdomen derecho o iz-
nes clínicas, o el paciente presenta una anemia inex- quierdo.
plicable o bien se palpa una tumoración en el lado 6. Trastornos dispépticos.
derecho del abdomen. Los tumores de esa localiza- 7. Protrusión de un tumor a través del ano.
ción son masas vegetantes o polipoideas, blandas y 8. Tumor descubierto al tacto rectal.

304
9. Oclusión intestinal sin otra causa que lo justi- Examenes complementarios
fique. Hemograma.Casi siempre se encontrará anemia
Detección precoz mi- crocítica e hipocrómica, por pérdida de sangre,
tras- tornos de la eritropoyesis, destrucción de
El pronóstico de esta neoplasia depende fundamen-
eritrocitos por el tumor y disminución de la
talmente del grado de progresión del tumor en la
pared intestinal y estructuras vecinas. Es por ello supervivencia de los hematíes.
que en los últimos años se ha preconizado la reali- Eritrosedimentación. Está acelerada.
zación de campañas de detección precoz de esta neo- Heces fecales. Para detectar la presencia de san-
plasia en los grupos de riesgo que a continuación se gre oculta.
relacionan: Pruebas funcionales hepáticas. Cuando hay me-
tástasis hepáticas, la fosfatasa alcalina se eleva en
Edad mayor de 40 años. ausencia de hiperbilirrubinemia; puede haber
Enfermedades asociadas: aumen- to de las transaminasas y retención de la
• Adenomas colorrectales. bromosulf- taleína.
• Enfermedades crónicas del intestino: Antígeno carcinoembrionario (CEA). Fue descu-
• Colitis ulcerosa. bierto en 1965 por Golg y Freedman. Este
• Enfermedad de Crohn. marcador tumoral es una glicoproteína que durante
• Síndromes de poliposis difusa: la corrida electroforética se ubica en el sector de las
• Síndrome de poliposis familiar. betaglobu- linas, por lo que también se le conoce
• Síndrome de Gardner (quistes y tumores como betafeto- proteína. Con su estudio por
de la piel y huesos). radioinmunoensayo, los valores normales son hasta
• Síndrome de Turcot ( manifestaciones neu- 2,5 ng/ml, y resultan fran- camente patológicas cifras
rológicas compatibles con tumores del de más de 20. El 80 % de los pacientes con cáncer
SNC). colorrectal tienen niveles de este antígeno tumoral
• Síndrome de Peutz-Jeghers (manchas elevados en el suero. Otros cánceres digestivos
melánicas en la mucosa de los labios, boca también lo elevan, así como en- fermedades
y dedos). distintas del cáncer (cirrosis, pancreati- tis, etc.).
• Síndrome de Cronkhite-Canada (alopecia, Existen otros marcadores tumorales, como el Ca
pigmentación de la piel y atrofia de las 19,9 o la fosfohexosa-isomerasa (PHI), que tienen
uñas). una sensibilidad diagnóstica inferior al CEA.
Historia familiar de cáncer digestivo y poliposis Rectosigmoidoscopia y colonoscopia transanal.
del colon. Permiten visualizar cualquier lesión tumoral, deter-
Antecedentes de cáncer o adenoma colorrectal minar su número, tamaño aproximado, distancia
previos. del borde anal, aspecto macroscópico, así como la
Antecedentes de cáncer de la mama. toma de muestras para biopsia por ponchamiento
Antecedentes de litiasis vesicular. de cual- quier zona tumoral o sospechosa; hacer
Tratamiento previo con radiaciones ionizantes por lavados y raspados de la mucosa con cepillos
cáncer ginecológico. escarificadores para tomar muestras y poder hacer
Enfermedades que cursan con inmunodeficiencia. el diagnóstico de afecciones concomitantes desde
Para ello se utiliza la prueba de sangre oculta en el punto de vista histológico. La biopsia es el
las heces fecales, practicada de forma rutinaria examen fundamental. Laparoscopia. Deja ver el
una vez al año. Las exploraciones diagnósticas tumor y sus caracterís- ticas macroscópicas
en per- sonas en las cuales esta prueba haya sido externas, así como determinar la presencia de
repetida- mente positiva (después de descartar la metástasis peritoneales y viscerales, sobre todo a
posibilidad de un resultado falso positivo), nivel hepático, además de ser útil para
permiten diagnosti- car carcinomas asintomáticos la toma de biopsia de éstas.
en estadios iniciales US abdominal. Descubre la masa tumoral como
de la enfermedad. una imagen ecogénica, y también la presencia de
metástasis ganglionares y hepáticas, ascitis, etc.
305
Cistoscopia. Es útil en el cáncer del recto para defectos de lleno por una válvula ileocecal promi-
detectar infiltración tumoral de la vejiga y permite, nente o a la presencia de granulomatosis.
además, la toma de biopsia.
TAC del recto. Está indicada para determinar si
existe infiltración tumoral alrededor de este órgano,
en caso de cáncer rectal. Puede hacerse en el abdo-
men para identificar metástasis ganglionares y he-
páticas.
Radiografía de tórax. Se indica para la detección
de posibles metástasis pulmonares.
Radiografia simple de abdomen con vistas de pie,
lateral y acostado. Tiene valor en los cuadros
oclusivos, donde muestra el patrón de una oclusión
del intestino grueso; pueden apreciarse, además, cal-
cificaciones o delimitación del defecto de lleno por
el gas del colon.
Colon por enema. Realizado bajo pantalla fluo-
roscópica, deja ver la reducción de la luz del co-
lon (Fig. 32.3), ausencia de la motilidad, pérdida de
los pliegues normales, defectos de lleno, irregulari-
dad de los bordes de una zona y detención intem-
pestiva de la columna de bario en la región afectada,
con caracteres de infiltración, así como trayectos
fistulosos (Fig. 32.4). En la porción cecal, el diag- Fig. 32.4. Neoplasia perforada del colon en el sigmoide. Nóte-
nóstico no resulta fácil, y ello se debe al relleno in- se el bario fuera de la luz intestinal.
completo, a mala eliminación del residuo cecal, a

Fig. 32.3. Estrechamiento del colon descendente por una neo- Fig. 32.5. Imagen de un pólipo en un neumocolon (método de
plasia. Fisher).
306
Método de Fisher (aire y bario) y técnica de Diagnóstico diferencial
Weber. Son métodos de doble contraste para preci- El diagnóstico diferencial se realizará fundamental-
sar con más detalles las lesiones sospechosas en el mente con diversas afecciones, según asiente el tu-
colon por enema (Fig. 32.5). mor en el lado derecho o en el izquierdo, y la forma
Colon por ingestión. El tránsito de la sustancia clínica que adopte (cuadro 32.1).
de contraste permite observar compresión o infiltra-
ción gástrica, distorsión de los pliegues de la tercera CUADRO 32. 1
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL DEL CÁNCER
porción del duodeno por ganglios metastásicos, de- DEL COLON SEGÚN SU LOCALIZACIÓN
fectos de lleno del borde de la columna de bario o Y FORMAS CLÍNICAS
manchas suspendidas y distorsión de la mucosa del
colon. Generalmente se indica cuando el enfermo Localización y formas
clínicas
no retiene el enema de bario, como sucede en los
ancianos. Forma dispéptica Litiasis vesicular, úlcera gas-
Enemas con espuma de silicón. Con este método L troduodenal y pancreatopatías.
de diagnóstico se obtiene un moldeado tridimensio- A
D Forma tumoral Plastrón apendicular, plastrón
nal del colon, donde queda impresa cualquier masa O vesicular, tiflitis, tuberculosis
tumoral en el molde. cecal de forma tumoral, tumo-
Debe tenerse cuidado al establecer el diagnóstico res del riñón y enteritis regio-
radiográfico de un proceso tumoral del colon, pues D nal de forma tumoral.
E
algunas imágenes de estrechamiento pueden ser pro- R Forma anemizante Neoplasia gástrica y anemias de
ducidas por el espasmo de los esfínteres fisiológi- E causa desconocida.
cos del órgano. C
Mesenteriografía. Se ha utilizado también para H Forma inflamatoria Absceso apendicular, diverticu-
O litis y procesos ginecológicos.
ver la disposición de los vasos y el aumento de la
vascularización de los tumores malignos. L Forma hemorrágica Poliposis, diverticulosis y
Gammagrafía. Es útil para la detección de metás- A hemorroides.
D
tasis hepáticas, óseas y cerebrales. O Forma tumoral Plastrón diverticular, espleno-
US endoscópico. Se indica en los casos de cáncer megalia, tumores del riñón
del colon y recto, para diagnosticar una infiltración I y retroperitoneales.
Z
extraluminal. Q
U Forma obstructiva Bridas posoperatorias y con-
Diagnóstico I génitas, hernias internas, vólvu-
Diagnóstico positivo E lo, cuerpos extraños e invagi-
R nación.
El diagnóstico positivo de los tumores malignos de D Forma inflamatoria Diverticulitis y procesos
colon y recto se basa en: O ginecológicos.

1. Los antecedentes del enfermo. Tienen gran va-


lor los factores de riesgo señalados. Complicaciones
2. Los síntomas y signos clínicos. Cambios en el Sangramiento. Casi siempre es ligero o moderado,
hábito intestinal, trastornos dispépticos, aste- y en raras ocasiones, masivo.
nia, anorexia, pérdida de peso, adinamia, cua- Obstrucción. Aproximadamente la tercera parte
dros oclusivos o suboclusivos, mucorrea, heces o la mitad de las obstrucciones agudas del colon
acintadas y anemia de origen oscuro. En el exa- son producidas por neoplasias; pueden deberse
men físico, el hallazgo de un tumor abdominal también a vólvulos o a una invaginación por un
o en el tacto rectal. carcinoma localizado en un sigmoide redundante.
3. Los exámenes complementarios. Son de mayor Infección secundaria. Ocurre con gran frecuen-
importancia diagnóstica los estudios imageno- cia por la riqueza bacteriana del colon y está
lógicos, endoscópicos y la biopsia. favore- cida por la necrosis del tumor. Es
fuente de

307
perforaciones, con formación de pericolitis y abs- días; si no se presentan signos de intolerancia, se
cesos. continuará con la mitad de la dosis en días alternos
Desequilibrio hidromineral y shock. Es conse- 4 veces más. Se repetirá el ciclo cada 6 semanas
cuencia de la obstrucción y la perforación. hasta completar 12 ciclos. Se puede asociar este
Fístulas. Se deben a la perforación del colon en citostático al levamisol como inmunomodulador.
vísceras vecinas. La radioterapia estará indicada en el carcinoma
Complicaciones urinarias por infiltración. Entre de la ampolla rectal preoperatoriamente, para redu-
ellas: polaquiuria, hidronefrosis y pielonefritis. cir el tamaño del tumor y facilitar el tratamiento
Colitis necrotizante. Complicación rara que afec- quirúrgico posterior. También se debe usar en los
ta el colon proximal por la obstrucción. linfomas malignos acompañada de citostáticos, en
Tratamiento el carcinoma epidermoide del ano, así como en los
pacientes que rehusan la operación.
La exéresis quirúrgica es el único medio terapéutico Después de la resección quirúrgica, las cifras del
que tiene posibilidad de curar el cáncer de colon y CEA se suelen normalizar y la persistencia de valo-
recto en sus comienzos, antes del establecimiento res elevados es muy sugerente de resección no radi-
de metástasis. Cuando éstas se han producido a dis- cal. Luego en el control evolutivo, la elevación del
tancia, puede aún emplearse este proceder como re- CEA es el primer signo de recidiva en el 60% de
curso paliativo si el tumor es resecable; esta conducta los pacientes.
es preferible a una colostomía definitiva. Con la exé-
resis, aunque no sea curativa, se evitarán al enfermo PROGRAMA DE SEGUIMIENTO POSOPERATORIO
las molestias inherentes al ano abdominal, al mismo DEL CÁNCER COLORRECTAL DURANTE 3 AÑOS
tiempo que se librará de las complicaciones que fa-
talmente han de presentársele (hemorragias, infec- Cada 3 meses: Determinación sérica de CEA.
ción, perforación, fístulas, obstrución, etc.) y que Cada 6 meses: Control clinicohumoral. TAC o
harán insoportables sus últimos días. USD. Colonoscopia si pólipos
asociados.
El procedimiento quirúrgico dependerá del esta- Anualmente: Colonoscopia (sin pólipos aso-
do del enfermo, de la ubicación y extensión local ciados).
del proceso y de la presencia o no de metástasis.
La existencia de un síndrome oclusivo impondrá
previamente el establecimiento de una colostomía Evolución y pronóstico
derivativa, que excluirá del tránsito intestinal al seg- En realidad, sólo después de resecada la neoplasia
mento afectado, lo cual actuará de manera favora- y realizado el examen anatomohistológico
ble al disminuir la infección y el estado inflamatorio correspon- diente, se está en condiciones de
de la lesión. Con su implantación, el cuadro local
establecer un pro- nóstico. Por medio del estudio
mejorará de forma apreciable, y esto permitirá rea-
microscópico del tumor es posible determinar los
lizar la operación proyectada con mayores garan-
factores pronósticos del cáncer colorrectal en
tías.
relación con su grado histo- lógico (según Bloom y
El tipo de exéresis que se debe realizar variará
Richardson); así, correspon- de a los
según la localización del tumor, pero esto escapa a
los objetivos de este libro. indiferenciados (más del 75 % de mitosis) un alto
La quimioterapia con 5-fluoracilo se indicará grado de malignidad. La supervivencia glo- bal a
como complemento del tratamiento quirúrgico en los 5 años de la resección quirúrgica es de 40 %, con
casos seleccionados y como tratamiento único en los porcentajes marcadamente diferentes para cada
tumores no resecables o con metástasis a distancia, estadio, según el examen anatomohistológico. La in-
que no presenten obstrucción. Se comenzará su ad- vasión de los ganglios linfáticos regionales es un
ministración consecutiva a la cirugía al mes de la dato de alto valor pronóstico; si la invasión regional
operación, previo chequeo clínico-humoral, en la afecta a 5 o más ganglios, la supervivencia a los 5
dosis de 15 mg/kg diarios, sin pasar de l g, diluidos años no sobrepasa el 10 %.
en 500 ml de dextrosa al 5 % en agua, durante 4 El cáncer colorrectal presenta una elevada ten-
dencia a la diseminación a distancia, debido a lo
díficil que resulta el diagnóstico precoz por razones
308
anatómicas, así como a la infiltración de vísceras y Las cifras de sobrevida reportadas a los 5 años
ganglios linfáticos que tiene lugar tempranamente de diagnosticada la enfermedad en estadios
en la evolución del tumor. Ello explica que el 50 % iniciales, son de 91 % en el colon y 85 % en el
de los pacientes a quienes se les realiza una inter- recto; con diseminación local o regional, 60 % en el
vención quirúrgica con intención curativa, presente colon y 51 % en el recto; pero si la enfermedad es
ganglios positivos y que en el 15 % de éstos exista diagnosticada en etapa avanzada (diseminación a
metástasis a distancia, por todo lo cual el 40 % de distancia) es menos del 7 %.
ellos muere antes de los 5 años de tratados. En la Es evidente que el desafío consiste en descubrir
actualidad se crean las bases para programas de de- estas neoplasias cuando aún es posible la resección
tección precoz del cáncer colorrectal. La cirugía, las curativa, de preferencia cuando son todavía pólipos
radiaciones ionizantes y la quimioterapia, constitu- adenomatosos.
yen la base del tratamiento para esta neoplasia.
309
33
SANGRAMIENTO DIGESTIVO
Concepto melena resulta del contacto de la sangre con el
ácido clorhídrico y la producción de hematina,
Se llama sangramiento digestivo a la extravasación
que pre- senta un olor característico y debe
de sangre en el aparato digestivo desde el esfínter
esofágico superior hasta el ano, que se manifiesta diferenciarse de las heces de color negro o gris
en forma de hematemesis, melena o hematoquecia oscuro que ocurren después de la ingestión de
(enterorragia), según la localización, la cantidad de hierro, bismuto, alimen- tos como tinta de calamar,
la pérdida hemática y la rapidez de la hemorragia. remolacha, etcétera. Cuan- do el sangramiento es
El sangramiento en su forma más leve se presenta suficiente para presentar hematemesis, de forma
como una anemia ferropénica debido a hemorragia usual existe melena, pero menos del 50 % de los
oculta en las heces fecales. pacientes con melena tienen hematemesis. La
Hematemesis. Es la expulsión de sangre median- melena indica sangramiento del esó- fago, estómago
te el vómito, que puede ser en forma de sangre roja o duodeno, pero las lesiones del yeyuno, íleon y
o de color negro, como borra de café. El color de la aun del colon ascendente también la causan si el
sangre vomitada depende de la concentración de tiempo de tránsito intestinal es prolon- gado.
ácido clorhídrico en el estómago y de la duración Hematoquecia (enterorragia). Es la expulsión de
de su contacto con la sangre, con la formación de sangre roja o roja vinosa por el recto, originada en
hematina. Así, si el vómito tiene lugar poco des- la parte distal del intestino delgado o en el colon.
pués del comienzo del sangramiento, aparece rojo, Sin embargo, un sangramiento proximal puede
y luego su apariencia puede ser roja oscura, carme- ocasio- nar hematoquecia a causa de un tránsito
lita o negra. Los coágulos de sangre precipitada y rápido.
degradada por el ácido en el vómito, producen la Todo sangramiento digestivo, aun si se detecta
apariencia de “borra de café”. La hematemesis de por pruebas positivas de sangre oculta, indica de
manera usual indica sangramiento proximal al liga- forma potencial una seria enfermedad y debe ser
mento de Treitz, porque la sangre que se extravasa debida- mente investigado.
por debajo del duodeno raramente penetra en el es-
tómago. La hematemesis debe diferenciarse de otras
Frecuencia
hemorragias que también se exteriorizan por la boca, Se considera que el sangramiento digestivo alto es
pero que tienen su origen fuera del aparato digestivo, motivo de ingreso en 100 por cada 100 000 habitan-
como son las hemoptisis y las epistaxis posteriores, tes y que la mortalidad por su causa oscila entre un 5
en que al deglutirse la sangre se expulsa en forma y un 10 %. Su incidencia aumenta con la edad, su
de vómito. pro- porción de hombres: mujeres es de 2 : 1, y
Melena. Es la emisión de sangre por el ano, lo está, ade- más, muy relacionado con la mayor
que da a las heces color oscuro, aspecto brillante y utilización de los antinflamatorios.
consistencia pastosa. Las heces adquieren estas ca- La hemorragia digestiva baja representa el 20 %
racterísticas cuando la pérdida de sangre es supe- del total de casos con sangramiento digestivo.
rior a 60 ml y ha permanecido en el intestino más El cuadro 33.1 muestra las causas más frecuentes
de 8 h; si la pérdida es mucho mayor, suele causar de sangramiento digestivo alto, según un estudio re-
melena durante 5 o 7 días. El color oscuro de la cientemente publicado, pero como
Helicobacter pylori es la causa fundamental de
la enfermedad

310
ulceropéptica y posee un tratamiento específico, es 3. Hemobilia.
muy posible que estos datos se modifiquen con el 4. Otras: discrasias sanguíneas primarias, vascu-
tiempo. litis, alteraciones del tejido conectivo.

Clasificación Úlcera péptica gastroduodenal. El 50 % de los


Como se ha expuesto, el sangramiento digestivo se casos de hemorragia digestiva alta se deben a una
clasifica en alto si su origen es proximal al ligamen- úlcera péptica. El sangramiento se observa en el 15
to de Treitz, y bajo, si es distal a éste. Esto se debe a a 20 % de los pacientes, y en el 20 % es la forma de
que raras veces la causa del sangramiento se encuen- presentación de la enfermedad. Debe sospecharse
tra en el yeyuno o el íleon, o sea, en la parte del tubo aun si no hay historia de ésta. La hemorragia se
digestivo que puede considerarse como media. pro- duce cuando la base de la úlcera erosiona una
Etiología arte- ria submucosa o serosa. El uso
concomitante de aspirina o de drogas
Sangramiento digestivo alto (SDA)
El 90 % de los sangramientos de este tipo son oca- antinflamatorias no esteroideas
sionados por: (AINE), aumenta el riesgo de sangramiento en los
pacientes ulcerosos y la mortalidad asociada a éste.
1. Úlcera péptica gastroduodenal. Gastropatía erosiva hemorrágica. Se presenta en
2. Gastropatía erosiva hemorrágica. enfermos con condiciones predisponentes tales
3. Síndrome de Mallory-Weiss. como: ingestión de alcohol, aspirina, AINE, enfer-
4. Ruptura de várices esofagogástricas. medades graves, traumatismos, hipertensión portal
5. Malformaciones arteriovenosas. y otras. Son lesiones múltiples, planas, de tamaño
inferior a 2 cm y cuya profundidad alcanza hasta la
Otras causas (10 % restante): mucosa. Los factores asociados con su aparición
1. Tumores benignos y malignos. son la hipersecreción ácida gástrica, la anoxia, el
2. Lesiones esofágicas (esofagitis, hernia hiatal, descenso del pH intramucoso y la alteración de los
carcinoma). mecanis- mos de defensa de la mucosa gástrica.
Generalmen- te su única manifestación clínica es la
CUADRO 33.1 hemorragia. Síndrome de Mallory-Weiss. Se debe a
DIAGNÓSTICO FINAL EN PACIENTES
laceracio- nes o desgarros longitudinales en la
INGRESADOS POR SANGRAMIENTO
DIGESTIVO ALTO mucosa de la unión esofagogástrica que erosionan
los vasos sub- mucosos, fundamentalmente de la
Diagnóstico % vertiente gástrica del cardias. La lesión se produce
por una contrac- ción del diafragma asociada a un
Ulcus péptico:
• Úlcera duodenal. 35,7 incremento de la presión transluminal en la unión
• Úlcera gástrica. 24,0 gastroesofágica. Desde el punto de vista clínico, hay
• Úlcera duodenal y gástrica. 1,2 vómitos o arquea- das repetidas antes de
• Úlcera gastroyeyunal. 0,8 manifestarse la hemorragia. Ruptura de várices
Enfermedad erosiva de la mucosa:
• Gastritis. 6,2
esofagogástricas. Todas las enfermedades que
• Duodenitis. 1,6 cursan con hipertensión portal, pueden provocar
• Gastroduodenitis. 2,7 una hemorragia por várices, y la más frecuente es
• Esofagitis. 3,9 la cirrosis hepática, donde el 20 % de los casos
Várices esofágicas. 6,2 presentan episodios de sangramiento. El
Misceláneas:
• Sind. Mallory-Weiss. 3,5
incremento de la presión en las várices y el adel-
• Úlcera esofágica. 1,6 gazamiento de sus paredes, condicionan su ruptura
• Neoplasias. 1,6 y sangramiento al alcanzar el punto crítico, que ca-
• Lesión de Dieulofoy. 1,2 racterísticamente es abrupto y masivo. Aunque el
• Otras. 1,9 SDA en un cirrótico sugiere el diagnóstico de
várices, algo más del 25 % de estos pacientes
sangran por otra lesión, como gastropatía erosiva,
úlcera péptica,
Desconocida. 8,1 gastritis, síndrome de Mallory-Weiss; es esencial

311
precisar el diagnóstico para determinar el tratamiento Menores de 55 años:
adecuado. 1. Enfermedad anorrectal (hemorroides, fisuras).
Malformaciones arteriovenosas. Son lesiones 2. Colitis (lesiones inflamatorias e infecciosas).
congénitas (enfermedad de Rendu-Osler-Weber) o 3. Diverticulosis.
asociadas a otras enfermedades, como la insuficien- 4. Pólipos, cáncer (hiperplasias, hamartomas).
cia renal crónica, cirrosis hepática, seudoxantoma 5. Angiodisplasia.
elástico, síndrome del nevus azul, síndrome de 6. Otras (discrasias sanguíneas primarias, vascu-
Turner y otras, que originan el 2 % de los SDA. Clí- litis, alteraciones del tejido conectivo).
nicamente se manifiestan por anemia crónica o he-
morragia grave recidivante. Debe pensarse también Mayores de 55 años:
en fístulas aortoentéricas en pacientes con aneuris- 1. Enfermedad anorrectal (hemorroides, fisuras).
mas de la aorta abdominal u operados con injertos 2. Diverticulosis.
aortoilíacos, los que a veces presentan una he- 3. Angiodisplasia.
morragia inicial leve que en horas tiene una recidiva 4. Pólipos, cáncer.
5. Enterocolitis (isquémica, infecciosa, inflama-
masiva.
toria, por radiación).
Tumores benignos y malignos. Los tumores del
6. Otras (discrasias sanguíneas primarias, vascu-
tubo digestivo alto causan el 1 o 2 % de las hemorra-
litis, alteraciones del tejido conectivo).
gias y los más frecuentes son el carcinoma, el
leiomioma, pólipos y los linfomas, que a veces pro- Enfermedad anorrectal. Las hemorroides y fisuras
ducen sangramiento masivo. producen pequeñas cantidades de sangre roja bri-
Lesiones esofágicas. La esofagitis por reflujo gas- llante en las heces o en el papel de aseo, que usual-
troesofágico, la hernia del hiato y el cáncer esofágico, mente son precipitadas por el pasaje de heces duras.
causan anemia crónica por microhemorragias per- La proctitis es otra causa de sangramiento rectal.
sistentes. La esofagitis puede ser péptica, asociada a Colitis. En ocasiones se presenta una diarrea san-
la ingestión de medicamentos; también se ve en pa- guinolenta en pacientes con colitis ulcerativa y tam-
cientes con retraso en el vaciado esofágico y ser pro- bién en infecciones por shigella, salmonella,
vocada por infecciones por hongos o virus en Camphylobacter jejuni, Clostridium dificile, Esche-
enfermos inmunodeprimidos richia coli enterohemorrágica toxigénica, amebas y
En la hernia del hiato se producen a veces erosio- otros parásitos.
nes del segmento digestivo contenido en el saco Diverticulosis. En niños y jóvenes el
herniario o una úlcera por compresión del hiato dia- sangramiento suele provenir de un divertículo de
fragmático. Meckel, lesión congénita en el íleon terminal
Hemobilia. Es la hemorragia a través de la ampo- presente en el 2 % de la población. En los
lla de Vater procedente del hígado, la vía biliar o el pacientes de más edad, la ma- yor frecuencia
páncreas. En el 40 % de los casos se caracteriza por corresponde a los divertículos del colon, que en
melena, dolor en el hipocondrio derecho e íctero fluc- el 3 a 5 % de los casos sangran por ruptura de
tuante. Se debe a procedimientos yatrógenos, trau- vasos adyacentes al divertículo por trau- matismo
matismos, aneurismas, litiasis, infecciones y estercoráceo. La hematoquecia se presenta de forma
tumores. súbita, asociada a dolor abdominal y urgen- cia
Otras. Existen otras causas de sangramiento di- defecatoria; el sangramiento persiste de manera
gestivo, como discrasias sanguíneas primarias, vascu- intermitente durante varios días y cede espontánea-
litis, alteraciones del tejido conectivo, etc., en que mente.
la ausencia de elementos de origen gastrointestinal Tumores. Los del intestino delgado son
y la presencia en la historia y examen de factores de responsa- bles del 5 al 10 % de los sangramientos
carácter sistémico, orientan hacia el diagnóstico. de este seg- mento del tubo digestivo. Los
leiomiomas y leiomiosarcomas son los tumores
Sangramiento digestivo bajo (SDB) más comunes, aun- que también se presentan el
El orden en la frecuencia de las lesiones del tubo carcinoide, el adeno- carcinoma y el linfoma. El
digestivo bajo varía según la edad: sangramiento puede ser oculto en las heces, como
melena intermitente y en ocasiones hematoquecia.
312
El cáncer del colon es más frecuente en personas a) La forma de presentación de la hemorragia
de mayor edad, y al igual que los pólipos y otros fue expuesta en el concepto: hematemesis,
tumores benignos, producen sangramiento crónico melena y hematoquecia, y es el primer elemento
oculto, aunque ocasionalmente presentan una he- que hay que conocer al enfrentarnos al paciente.
morragia de mayor cuantía. La elevada frecuencia b) Las manifestaciones clínicas de la anemia
del cáncer del colon debe constituir un alerta per- agu- da constituyen el factor primordial que se
manente para precisar o eliminar el diagnóstico de debe te- ner en cuenta, porque de ello puede
manera definitiva. depender la vida del paciente, y lo primero que
Angiodisplasia. Son dilataciones vasculares de debe realizarse es la toma de la presión y el pulso
arteriolas, capilares y vénulas que en ocasiones for- arterial, y observar el color de la piel, estado de la
man fístulas arteriovenosas y constituyen una causa perfusión hística y de la conciencia, y el volumen
mayor de sangramiento agudo o crónico en pacien- de la diuresis.
tes mayores. Pueden presentarse ectasias vascula- En el cuadro 33.2 se muestran los datos que per-
res, mayormente localizadas en el colon ascendente mitirán tener una idea bastante aproximada de la
y ciego, como resultado de un incremento de la pre- pérdida sanguínea.
sión intraluminal. Están asociadas a otras enferme- En pacientes que sin llegar a tener pérdidas san-
dades: estenosis aórtica, insuficiencia renal crónica yguíneas como las señaladas presentan un sangra-
enfermedad de Von Willebrand. En el 90 % de los miento brusco, son muy aprehensivos o tienen
casos la hemorragia cesa de forma espontánea. otros procesos previos a la hemorragia que agravan
Enterocolitis. En personas mayores, diabéticos y el cua- dro, tales como: ancianidad, anemia crónica,
pacientes con enfermedad vascular, la isquemia enfer- medades con toma del estado general, etc.,
mesentérica produce a veces diarrea sanguinolenta. suelen aparecer síntomas de esta envergadura, pero
Las proctitis inflamatorias por procesos vecinos, in- transi- torios.
fecciosas y por radiaciones, son otras causas de SDB. Los sangramientos crónicos de algún tiempo de
Otras. Son similares a las tratadas en el SDA. evolución tienen como manifestación de la anemia
la palidez cutaneomucosa con un posible ligero au-
Cuadro clínico mento de la frecuencia del pulso.
El sangramiento digestivo se presenta en forma agu- c) Las manifestaciones clínicas de la afección de
da o crónica, pero la primera es la más grave y sus base comprenden:
elementos fundamentales son: Los antecedentes: Episodios previos de sangra-
a) Forma de presentación del sangramiento. miento, síntomas como dolor epigástrico ulceroso,
b) Manifestaciones clínicas de la anemia. reflujo gastroesofágico, vómitos reiterados, alcoho-
c) Manifestaciones clínicas de la afección de base. lismo, ingestión de medicamentos y otros.
El examen físico: En primer lugar, la valoración
hemodinámica como ya se explicó. Examen de la
CUADRO 33.2
ESTIMADO DE LA PÉRDIDA SANGUÍNEA

Clase I Clase II Clase III Clase IV


Pérdida sanguínea (ml) Hasta 750 750-1 500 1 500-2 000 2 000 o +
Pérdida sanguínea Hasta 15 % 15-30 % 30-40 % 40 % o +
(% vol. sang.+)
Frecuencia del pulso < 100 >100 >120 140 o +
Presión arterial (mmHg) Normal Normal Disminuida Disminuida
Presión del pulso Normal o disminuida Disminuida Disminuida Disminuida
Relleno capilar Normal Positivo Positivo Positivo
Frecuencia respiratoria 14-20 20-30 30-40 >40
Diuresis (ml/h) 30 o + 20-30 5-15 Insignificante
Estado mental Lig.ansioso Mod. ansioso Ansioso y confuso Confuso; letárgico

313
orofaringe; tacto rectal para comprobar la existen- Sangramiento digestivo alto
cia de melena o hematoquecia y recoger posibles Diagnóstico
datos sobre la presencia de tumores, ulceraciones y La forma de sangramiento, los antecedentes, el
otros; el examen de la piel en busca de signos clíni- exa- men físico y los de laboratorio ya señalados,
cos de enfermedades asociadas o causas específicas por lo común guían hacia el diagnóstico etiológico
de hemorragia, como: telangiectasias, pigmentaciones
de un SDA, pero debe comprobarse con los
mucocutáneas, hiperlaxitud cutánea, fibromas, quistes
sebáceos, tumores óseos y los estigmas de hepato- siguientes ele- mentos:
patía e hipertensión portal, hallazgo de adenopatías 1. Sonda nasogástrica. Se debe pasar la sonda
y masas que hagan sospechar neoplasias. para vaciar el estómago y determinar si el
Examenes complementarios sangra- miento es proximal al ligamento de
En todo sangramiento digestivo deben indicarse di- Treitz. Si la aspiración inicial es clara o
versos exámenes de laboratorio. biliosa, no debe existir hemorragia activa y la
Hematócrito. En las hemorragias bruscas el he- sonda puede ser retirada.
matócrito inicial no refleja con certeza la magnitud Si se aspira sangre o “borra de café”, hay que
de la pérdida de sangre, ya que el equilibrio con el hacer lavado gástrico con solución salina a
líquido extravascular y la hemodilución demoran a tem- peratura ambiente. Esta irrigación tiene
menudo más de 8 horas. dos pro- pósitos: 1. indicar al médico la
rapidez del sangramiento y 2. limpiar el
Hemograma y conteo de plaquetas. Hay leucoci-
estómago de san- gre y coágulos antes de la
tosis moderada y trombocitosis, que se manifiestan
endoscopia.
dentro de las 6 h siguientes al sangramiento.
2. Endoscopia de esófago, estómago y duodeno.
Urea sanguínea. Está elevada, especialmente en
Se realiza cuando el paciente está estable he-
el SDA, por ruptura de las proteínas hemáticas y
modinámicamente, pero en las primeras 12 h
liberación de productos nitrogenados por las bacte-
de la hemorragia; ofrece diagnóstico en el 80
rias intestinales, así como por reducción moderada
a 90 % de los casos y provee información
de la filtración glomerular.
pronóstica sobre la posibilidad de nuevo san-
Creatinina sanguínea. También suele encontrar-
gramiento y la factibilidad de tratamiento
se elevada, pero no en la proporción de la urea, por
endoscópico. Si hay evidencia de SDA persis-
lo que un índice urea/creatinina igual o mayor de 25,
tente, basado en la aspiración continua de san-
hace sospechar un SDA.
gre por la sonda y en la dificultad para
Otros. La determinación de la glicemia es obliga-
estabilizar de forma hemodinámica al enfermo,
da en los pacientes diabéticos; el ionograma y la
la endoscopia debe hacerse de urgencia. Si se
hemogasometría son necesarios en el tratamiento de
encuentra el origen del sangramiento, el
los enfermos graves y ancianos; los estudios de la
endoscopista debe determinar la posibilidad
coagulación se indicarán en los casos con sospecha
de que el tratamiento endoscópico pueda
de discrasias sanguíneas; la prueba del guayaco o
detener la hemorragia, como en los casos de :
guayacol para determinar la presencia de actividad
Úlcera gastroduodenal. Existen varias po-
de la peroxidasa en la hemoglobina, que detecta la
sibilidades: inyección de un agente vaso-
existencia de sangre oculta en las heces y eleva la constrictor, como la epinefrina, o de uno
sospecha de neoplasia, especialmente baja. esclerosante, y el uso de electrocauterio con
Los exámenes complementarios con otros medios electrodo unipolar o bipolar, o con calor.
varían de acuerdo con el origen del sangramiento. Este tratamiento debe intentarse cuando
Diagnóstico y tratamiento existe una arteria sangrando que no cesa de
Las variantes etiológicas de las hemorragias altas y forma es- pontánea, o cuando hay un vaso
bajas, establecen la necesidad de analizar estos as- visible en la base de la úlcera (arteriola),
pectos separadamente. que implica un 50 % de riesgo de
sangramiento.
Gastropatía erosiva hemorrágica. Por uso
de aspirina, AINE u otro irritante, es
usualmente no susceptible de tratamiento
endoscópico
314
y por lo general la hemorragia cesa cuando inferior a 0,1 ml/min, ya que el Tc99 tiene vida
se elimina el agente agresor y se adminis- media de 24 h y permite obtener una
tran antagonistas de los receptores de hista- secuencia de imágenes sin riesgo de
mina (cimetidina, 300 a 600 mg EV, cada 6 h). complicaciones, aun- que las transfusiones
Malformaciones arteriovenosas. Pueden ser múltiples limitan su efec- tividad diagnóstica
tratadas con electrocauterio bipolar, aunque y llegan a un 50 % de falsos negativos.
a veces no están sangrando en el momento 6. Estudio radiológico de esófago, estómago
del diagnóstico. y duodeno. No está indicado en la
Síndrome de Mallory-Weiss. Usualmente el hemorragia activa por la posibilidad de que
sangramiento cesa de manera espontánea, dé la imagen de una afección coincidente y no
pero si persiste, lo más común es que requiera sea la que está sangrando; además, el bario
cauterio o terapia por inyección. entorpece la vi- sualización endoscópica.
Várices esofagogástricas. Se les encuentra Tiene hasta un 50 % de valor diagnóstico
sangrando en forma activa, rezumando san- cuando cesa el sangra- miento y no hay otro
gre o mostrando estrías de sangre que indi- medio disponible.
can sangramiento reciente. El tratamiento
más común es la escleroterapia inyectando Tratamiento
Cuidados prehospitalarios. Al enfrentar esta con-
las várices con agentes esclerosantes, como
tingencia en un medio extrahospitalario, se debe
la etanolamina, el tetradecilsulfato, el morrua-
de- terminar en primer lugar la permeabilidad de la
to de sodio o el alcohol absoluto. Reciente-
vía aérea y los estados respiratorio y circulatorio
mente se está incrementando el uso de la
del en- fermo. Los pacientes con toma de la
ligadura o banding de las várices, que está conciencia o que no sean capaces de proteger su
asociada con un bajo riesgo de formación de propia vía aérea, deben ser intubados en el propio
estenosis esofágica y evita la toxicidad de la lugar y se les sumi- nistrará oxígeno al 100 %. Al
escleroterapia. resto de los casos se administrará oxígeno a través
Si la terapéutica endoscópica o farmacoló- de una cánula nasal si vomitan, o por máscara, si
gica fallan en detener la hemorragia, debe no lo hacen. Resulta con- veniente vigilarlos
usarse la sonda de Sengstaken-Blakemore, mediante oximetría de pulso.
que comprime las várices temporalmente Una vez realizadas la anamnesis y el examen
hasta que sea factible intentar el tratamiento físi- co del paciente, se debe canalizar una vena
definitivo de la hipertensión portal, que se- superfi- cial con aguja 14F o 16F durante su
ría una anastomosis venosa portosistémica, traslado y administrar soluciones cristaloides EV
operación de alto riesgo dado el estado del para mante- ner una presión arterial sistólica
paciente. superior o igual a 90 mmHg. El enfermo debe
3. Angiografía. Si el sangramiento es tan severo adoptar la posición de Sim (decúbito lateral
que endoscópicamente no se localiza el sitio izquierdo con el muslo dere- cho flexionado 900
que sangra, hay que intentar una angiografía, en relación con la cadera) para prevenir la
como la mesentérica selectiva, que a veces broncoaspiración. Si está hipotenso, debe adoptar la
muestra la salida de contraste en el sitio de la posición de Trendelenburg (inclinado con la cabeza
hemorragia. Esto es factible cuando el índice hacia abajo 45°).
de sangramiento es de 0,5 ml/min o más; pue- Todos los elementos de identificación del
de dar diagnóstico en el 40 a 80 % de los casos pacien- te, los resultados de la anamnesis y el
y permitir la intervención quirúrgica de urgen- examen físi- co, así como las medidas
cia con precisión. Existen otros métodos, pero terapéuticas adoptadas, deben de comunicarse
tienen contraindicaciones relativas. desde la ambulancia al de- partamento de
4. TAC. Tiene utilidad en el diagnóstico de la fís- urgencias del hospital de referencia. Atención en el
tula aortoentérica. departamento de urgencias. Una vez evaluado el
5. Gammagrafía con hematíes marcados con enfermo mediante el examen físico y la toma de los
tecnetio99. Es útil en sangramientos con índice signos vitales, se continúa la admi- nistración de
oxígeno y su vigilancia por oximetría de pulso, se
inicia la monitorización cardíaca y, si existe
inestabilidad hemodinámica, se garantiza otra
vía venosa accesoria.
315
Independientemente de su estado clínico, todo laterales, como consecuencia de vasoconstricción
paciente con manifestaciones de hipotensión arte- excesiva, están dolor abdominal, diarreas e isque-
rial, taquipnea, taquicardia, ortostatismo, angina de mia intestinal. Puede exacerbar la isquemia miocár-
pecho o con alteraciones de su estado mental, re- dica y provocar necrosis de la piel. Estos efectos
quiere de reanimación inmediata. indeseados se previenen o aminoran con nitroglice-
La presión arterial sistólica debe mantenerse por rina transdérmica, sublingual o endovenosa.
encima de 90 mmHg mediante “golpes de agua” con Somatostatina. Es un polipéptido natural que
solución Ringer o salina fisiológica al 0,9 %. Des- dis- minuye la presión portal mediante
pués de cada administración de líquidos, se toman vasoconstricción esplácnica y posee menos efectos
nuevamente los signos vitales y se ausculta el cora- colaterales que la vasopresina. Se administra en
zón y los campos pulmonares, de forma tal, que se una infusión continua que suministre al paciente
pueda hacer el diagnóstico de sobrecarga líquida. Si 250 mcg/h, durante 48h, y al mismo tiempo se
el paciente se mantiene inestable después de la ad- añaden 250 mcg por el tubo de la venoclisis cada 6
ministración de 2 L de cristaloides/coloides y si exis- h, durante las primeras 24 h. Octreotide. Es un
ten manifestaciones de angina o cambios isquémicos análogo sintético de la soma- tostatina con
en el electrocardiograma, hay que valorar la utiliza- similares efectos hemodinámicos, pero de mayor
duración. Se administra en una infusión de 25
ción de hemoderivados.
mcg/h durante 12 h. Al finalizar ésta, se sumi-
En algunos medios se usan soluciones salinas
nistran 2 dosis subcutáneas de 100 mcg, separadas
hipertónicas al 3 % (dosis máxima: 12 ml/kg) o
por un intervalo de 6 h.
al 7,5 % (100 a 400 ml) para la reanimación, y noti-
Otros medicamentos. La cimetidina reduce las
fican excelentes resultados.
posibilidades de nuevo sangramiento, la necesidad
Hay que mantener una sonda vesical para medir de cirugía e, inclusive, la mortalidad en caso de que
la diuresis horaria y aplicar los restantes métodos la causa sea una úlcera gástrica. Se utilizan 300 mg
que se emplean en todo shock; además, valorar la por vía EV como dosis de ataque, seguida de una
posibilidad de una vía venosa central que ayude al infusión que suministre 50 mg/h. La ranitidina, en
diagnóstico de sobrecarga líquida si existen antece- una infusión que provea 6,25 mg/h, disminuye en
dentes de enfermedad cardíaca, pulmonar, renal o forma significativa el sangramiento producido por
hepática. úlcera de stress. El propranolol reduce a largo plazo
La administración de cada unidad de glóbulos la recurrencia del sangramiento por várices esofági-
(250 ml) o de sangre (500 ml), debe aumentar en 3 cas, pero carece de indicación en el episodio agudo.
puntos el hematócrito, y de no comportarse así, se Los enfermos a los que no se logra estabilizar,
sospechará que el sangramiento continúa activo. El con diagnóstico o sin él, requerirán tratamiento qui-
momento ideal para realizar el hematócrito es el rúrgico de urgencia, que estará indicado en los ca-
período de 10 a 20 min que sigue a la administra- sos siguientes:
ción de cristaloides al paciente.
Además de la valoración quirúrgica y de la reali- • Casos en shock que no logran compensarse.
zación de la endoscopia de urgencia, así como de • Pacientes a quienes se les han administrado
los exámenes complementarios indispensables, se transfusiones superiores a 2 000 ml y la
debe recordar que el sangramiento digestivo alto no tensión arterial sistólica no se logra subir de
provocado por várices esofágicas, se detiene espon- 90 o 100 mmHg, y el hematócrito y la
táneamente en el 80 % de los casos y que en el pro- hemoglobina se mantienen alrededor de 20 %
ducido por várices esofágicas se comporta igual en y 70 g/L, respec- tivamente.
el 60 % Es por ello que resulta de utilidad iniciar • Enfermos con mal estado general previo al
tratamiento con uno de los siguientes medicamen- san- gramiento, que se depauperan con
tos para detener el sangramiento: rapidez.
Vasopresina. Éste es un fármaco vasoconstrictor • Escasa reserva de sangre del tipo del paciente.
(estimula los receptores V1) con efectos en el lecho La intervención quirúrgica variará de acuerdo con
esplácnico y se administra habitualmente en dosis el diagnóstico o hallazgos: sutura del vaso
de 0,2 a 0,4 U/min. Entre sus manifestaciones co- sangran- te y piloroplastia o vagotomía, y sutura
de las úlce- ras; gastrectomía parcial o
subtotal en úlceras;
316
gastropatías erosivas hemorrágicas y neoplasias; y de ellos, la causa radica en el intestino delgado. Se
ligadura transtorácica de várices esofágicas o anasto- indicará entonces:
mosis portosistémica. Tránsito intestinal. Sólo detecta del 5 al 10 % de
Los pacientes estables recibirán tratamiento mé- las lesiones, por ser la mayoría de ellas intralumi-
dico si es de esta naturaleza la afección. El definiti- nales.
vo será médico o quirúrgico, según la enfermedad. Enteroscopia. Con equipos adecuados se explora
Éste se hará durante el propio ingreso en caso de hasta 60 cm distales al ligamento de Treitz y se
una afección maligna, sospechada o comprobada, o des- cubre el origen de la hemorragia en el 38 %
diferido si es necesario por otras causas. de los casos. Si aún no se tuviera diagnóstico,
Sangramiento digestivo bajo (SDB) puede reali- zarse la enteroscopia durante una
Diagnóstico laparotomía, que permite explorar todo el intestino
Al igual que en el SDA, la forma de sangramiento, delgado y llegar al 83 o 100 % de diagnóstico.
los antecedentes y el examen físico, deben orientar
al diagnóstico, y por supuesto, el primer elemento Tratamiento
sería eliminar que se trate de un SDA, por lo que de Los elementos iniciales del tratamiento serán igua-
les a los del SDA, hasta lograr la estabilidad hemo-
existir dudas se pasará la sonda nasogástrica y, de
dinámica del paciente. Debe añadirse la colocación
ser necesario, se hará una endoscopia superior.
de una sonda nasogástrica que, con la aspiración
Sigmoidoscopia. En el SDB la mayoría de las le-
constante, ayudará a poner en reposo el tubo diges-
siones se localizan en la porción distal del colon
tivo bajo.
descendente y la endoscopia detecta el origen en Los enfermos a los que no se logra estabilizar,
el 92 % de los casos, después de haber realizado con diagnóstico o sin él, requerirán cirugía de ur-
una limpieza gentil del colon con enema salino. gencia, que estará indicada en iguales condiciones
Colonoscopia. Si el paciente está estable, se lim- que en el SDA. La intervención quirúrgica variará
piar el colon con solución de manitol o polietilen- según el diagnóstico o los hallazgos: laparotomía
glicol y se realiza una colonoscopia mediante la cual con revisión del segmento intestinal donde se
se podrá hacer exéresis de pólipos, cauterización de detecta la parte proximal de la sangre acumulada,
angiodisplasias o inyección con epinefrina de diver- que puede conducir a una resección de intestino
tículos sangrantes. delgado o del colon.
Gammagrafía con hematíes marcados con En el caso de diverticulosis del colon, el sangra-
tecnetio99. Si los exámenes anteriores son negativos miento se detiene generalmente con la ejecución de
pero hay sangramiento remitente o intermitente, se una colostomía proximal a la lesión, la cual se re-
debe intentar la gammagrafía, con la cual se obtie- vierte un tiempo después (1-2 meses) y se continúa
nen imágenes hasta las 48 h, tanto del intestino grue- con tratamiento higienodietético.
so como del delgado. En los pacientes estables se indicará:
Angiografía. Si el sangramiento es severo, el pa-
• Control hemodinámico seriado según las nece-
ciente no está estable y no es posible realizar los
sidades.
exámenes anteriores, está indicada una angiografía • Control de la evolución del sangramiento con
mesentérica, que expondrá el sitio de la hemorragia hematócrito seriado.
y facilitará la solución quirúrgica de ser necesaria. • Mantener la sonda nasogástrica con aspiración
Estudio radiológico contrastado del colon. Debe hasta que cese el sangramiento.
realizarse en los enfermos estables y especialmente • Relajantes de la fibra muscular lisa, preferente-
después de haber cesado el sangramiento, para pre- mente elixir paregórico, para disminuir la mo-
cisar lesiones que no hayan sido diagnosticadas con tilidad intestinal.
otros métodos.
Entre 5 y 20 % de los casos no puede detectarse Al cesar por completo el sangramiento, se hará:
el origen de la hemorragia, a pesar de haber realiza-
• Incremento paulatino de la dieta.
do los exámenes señalados, y entre el 30 y el 70 %
• Tratamiento médico o quirúrgico definitivo, se-
gún lo requiera la enfermedad diagnosticada.
317
Complicaciones dad grave asociada, coagulopatía, inmunodepresión,
Puede producirse aspiración broncopulmonar de la diagnóstico incierto y hemorragias graves que pro-
ducen shock y requieren transfusiones en número
sangre, encefalopatía hepática en la cirrosis, altera-
mayor de 5 unidades.
ciones de la función renal y de la coagulación por
Las hemorragias por várices esofagogástricas
transfusiones masivas, así como un síndrome de
distress respiratorio agudo. tie- nen un pronóstico reservado, que depende del
grado de insuficiencia hepática; la mortalidad es
Evolución y pronóstico del 70 % en los casos más avanzados; tienen una
recidiva del 54 % en los primeros 5 días y del 72
La hemorragia digestiva cesa espontáneamente en
el 70 a 80 % de los casos. La mortalidad global es % a los 6 meses, si no se instaura el tratamiento
del 8 a 10 %, pero alcanza el 30 a 40 % cuando el correcto de urgencia y el preventivo definitivo,
sangramiento es persistente y el 21 % cuando es respectivamente. Los sangramientos producidos
masivo. por procesos ma- lignos, aunque sobrevivan a la
Los factores de riesgo de hemorragia persistente hemorragia aguda, tendrán un pronóstico sombrío
o recidivante son: edad superior a 65 años, enferme- que dependerá de su
estadio clínico.
318
34
ABDOMEN AGUDO
El abdomen agudo constituye una urgencia médica Conducta del médico ante un paciente
producida por múltiples afecciones y que encierra con un dolor abdominal agudo
un potencial de gravedad para el enfermo que lo
padece, si no se diagnostica con brevedad y se trata Lo primero que debe determinar el médico ante un
de manera adecuada; para conseguir esto, el médi- paciente con dolor abdominal agudo, es si ese dolor
co que lo enfrenta debe poner en práctica todo su lo produce un abdomen agudo, y por lo tanto, nece-
conocimiento y experiencia, pues el error diagnós- sitará tratamiento quirúrgico, o por el contrario, si
tico y la tardanza en el tratamiento hacen peligrar la se trata de una afección que requiere tratamiento
vida del paciente. mé- dico. Para lograr esto se deben cumplir los
Los enfermos de SIDA que desarrollan un abdo- pasos si- guientes:
men agudo tienen mayor morbilidad y mortalidad 1. Realizar una historia clínica lo más completa
en comparación con otros pacientes; además, en ellos posible y tratar de hacer el diagnóstico
se presenta con un cuadro que tiene determinadas positivo y diferencial precozmente. La
atipicidades debido a la inmunosupresión que pa- experiencia ha demostrado que la pobre
decen. recolección de los sín- tomas, signos y
Otro factor de gravedad que enfrentan los enfer- antecedentes del paciente, la realización de
mos con abdomen agudo, es el llamado síndrome un examen físico incompleto y la omisión del
compartimental abdominal, que no es más que el tacto rectal o vaginal, van segui- dos del error
aumento de presión dentro del abdomen, capaz de en el diagnóstico.
afectar la circulación y comprometer la viabilidad 2. El enfermo no deberá ser medicado hasta no
de los tejidos existentes dentro de éste, lo que pue- hacer el diagnóstico, pues puede enmascararse
de desarrollar un fallo multiorgánico y poner en el cuadro clínico y dificultar éste.
peligro la vida del paciente; este incremento de pre- 3. Realizar los exámenes complementarios
sión dentro del abdomen se produce de manera aguda urgen- tes o indispensables capaces de
y su único tratamiento es la descompresión de la confirmar el diagnóstico clínico.
cavidad abdominal. 4. En el caso que existan dudas, deberá reexami-
Por lo antes señalado, todo médico que atiende a narse al paciente tantas veces como sea nece-
un paciente portador de un cuadro doloroso abdo- sario, hasta definir el diagnóstico correcto.
minal, puede estar frente a un abdomen agudo hasta
5. Los enfermos portadores de traumatismo
tanto no se demuestre lo contrario.
abdo- minal permanecerán en observación,
con una vigilancia estrecha durante las
Concepto
siguientes 24 a 48h, pues en ellos podría
Se incluyen en el concepto de abdomen agudo una aparecer una peritonitis por perforación de
serie de cuadros clínicos que se expresan por dolor víscera hueca o una hemorragia
abdominal de desarrollo rápido y tórpido hacia la intraperitoneal por lesión sub- capsular del
gravedad, que de no tener tratamiento quirúrgico in- hígado o del bazo, al romperse di- cha cápsula.
mediato, evolucionan hacia un cuadro de shock y
muerte.

319
Afecciones médicas agudas que pueden bina como del hematócrito, señalará una hemocon-
centración, como se observa en la deshidratación
simular un abdomen agudo Hay afecciones de la oclusión intestinal. El conteo de los leucocitos
médicas que cursan con dolor abdo- minal de se incrementará en los procesos infecciosos y en
aparición brusca y que simulan un cuadro de los casos más graves habrá granulaciones tóxicas.
abdomen agudo. Son las siguientes:
Orina. A veces se encuentra glucosuria como
Afecciones cardiovasculares: ex- presión de una diabetes mellitus descompensada
1. Infarto del miocardio (sobre todo de cara dia- que ha llevado al paciente a una cetoacidosis
fragmática). diabética, o por una pancreatitis aguda con
2. Pericarditis aguda. deterioro de la fun- ción endocrina del páncreas.
3. Congestión pasiva del hígado. También en la orina puede encontrarse
4. Lesiones embólicas: renal y esplénica. hematuria, piuria o cilindruria, como expresión de
una afección renal, y en ocasio- nes el contacto del
Afecciones torácicas: uréter con procesos inflamato- rios intrabdominales
1. Neumonía (de la base del pulmón). (apendicitis, diverticulitis, etc.) es el que produce
2. Neumotórax espontáneo. estas alteraciones.
3. Pleuritis. Glicemia. Las alteraciones de la glicemia en los
4. Mediastinitis. procesos abdominales agudos, suelen orientar hacia
5. Contusiones torácicas. una diabetes descompensada o una pancreatitis.
Ionograma y gasometría. Estos exámenes com-
Afecciones genitourinarias: plementarios demostrarán al médico las alteracio-
1. Cólico nefrítico. nes del medio interno provocadas por los procesos
2. Orquitis y funiculitis aguda. intrabdominales agudos y que deberán corregirse
3. Pielonefritis aguda. antes de someter al paciente a una intervención qui-
4. Crisis de Dietl en la ptosis renal. rúrgica de urgencia.
5. Ovulación dolorosa. Enzimas. La determinación de la amilasa y
6. Metroanexitis aguda. lipasa séricas puede esclarecer el diagnóstico de
una pan- creatitis aguda no bien definida, cuando
Afecciones digestivas: las cifras de sus resultados se elevan a cinco o más
1. Cólico hepático. veces su valor normal. Cifras altas de estas
2. Gastritis aguda. enzimas se en- cuentran también en enfermos con
3. Gastroenterocolitis aguda.
perforación gas- troduodenal, oclusión intestinal o
insuficiencia renal, pero en estos casos no serán tan
Otras afecciones:
elevadas como las observadas en la pancreatitis
1. Anemia de células falciformes.
aguda.
2. Acidosis diabética.
La deshidrogenasa láctica por lo general se en-
3. Intoxicación por plomo.
cuentra aumentada en cualquier proceso con
4. Crisis tabética.
destruc- ción hística.
5. Púrpura de Schönlein-Henoch.
6. Tétanos. Electrocardiograma. Se realizará en todo
7. Porfiria. pacien- te por encima de 45 años de edad, como
examen preoperatorio y para excluir un IMA.
Exámenes complementarios Radiología. La radiografía de tórax servirá para
Los exámenes complementarios que se deben indi- demostrar la presencia de aire libre en la cavidad
car a los pacientes portadores de un abdomen agu- peritoneal (Fig. 34.1), pues en este estudio es
do, siempre serán de urgencia. donde mejor se observan los hemidiagramas; en los
Hemograma. Una disminución en las cifras de pacien- tes sospechosos de perforación de una
hemoglobina confirmará una hemorragia intrabdo- víscera hue- ca, la placa se hará con el enfermo de
minal; un aumento en las cifras, tanto de hemoglo- pie o sentado; en los que no es posible conseguir
esta posición, se realizará con la persona acostada
en la posición de Pancoast.
320
Fig. 34.2. Imagen radiológica de una oclusión mecánica del
intestino delgado.
pueden recibir tratamiento por esta misma vía. Es
el examen complementario preferido en los
Fig. 34.1. Neumoperitoneo en una úlcera perforada. Obsérve- pacientes con SIDA por la mortalidad de la
se la presencia de aire debajo de ambos hemidiafragmas.
laparotomía abierta en este tipo de enfermo.
El estudio radiográfico del abdomen simple defi- Ultrasonido. Tiene sus mejores indicaciones en el
ne si la oclusión es del intestino delgado o del grue- diagnóstico de los procesos peritoníticos y
so. En las oclusiones del intestino delgado se hemorrági- cos y en el denominado abdomen agudo
encontrará una distensión organizada de las asas del- mixto e in- definido. En los procesos
gadas, con las válvulas conniventes como pilas de inflamatorios, precisa el aumento de volumen de
monedas en la posición anteroposterior acostado, y los órganos inflamados, como es el caso de la
en la posición de pie aparecerán los niveles vesícula; en los ginecológicos, demuestra la
hidroaéreos (Fig. 34.2); cuando se trata de una oclu- presencia de abscesos tubarios y ováricos; en
sión del intestino grueso, se verá una distensión de las perforaciones, detecta el contenido ecolúcido
un asa de mayor diámetro con los haustros típicos entre las asas intestinales o en el fondo de saco de
de este segmento del intestino; un enema de bario Douglas; en las hemorragias intraperitonea- les,
esclarecerá la causa y mostrará la imagen en llama señala la pérdida de la ecogenicidad hemorrági- ca
de vela en los vólvulos o la de escarapela en las de los órganos macizos después de una ruptura; en
invaginaciones. el embarazo ectópico, roto o no, descarta un úte- ro
La presencia de aire en las vías biliares hará sos- grávido que no se corresponde en tamaño con el
pechar un íleo biliar, que es la oclusión intestinal período de amenorrea; y en el abdomen agudo mix-
por el enclavamiento de un cálculo vesicular en la to, demuestra el incremento de la ecogenicidad di-
válvula ileocecal, al migrar aquél a través de una fusa del páncreas (pancreatitis aguda) o detecta un
fístula biliar interna (complicación de una litiasis ovario quístico (ecolúcido), ahora aumentado de ta-
vesicular). maño.
Laparoscopia. Después de varias etapas con di- La tecnología actual puesta en función de este
ferentes concepciones acerca de su utilidad o no en estudio, ha llevado a la posibilidad de contar con
el abdomen agudo, hoy en día, con el desarrollo de transductores ultrasónicos acoplados a un trócar, lo
la cirugía video-endoscópica, la laparoscopia se re- que permite convertir este examen no invasivo o
serva para confirmar aquellas enfermedades que inocuo en una prueba de investigación o
terapéutica invasiva, al combinar con el hallazgo
ultrasónico la

321
punción en el punto preciso de la cavidad peritoneal,
que permite obtener muestras líquidas con la que se SÍNDROME
llega a conclusiones diagnósticas y a establecer con-
ductas terapéuticas de urgencia.
PERITONEAL
Punción abdominal. Este proceder diagnóstico
tiene las indicaciones siguientes: El síndrome peritoneal es el producido por la infla-
mación del peritoneo, y a su vez se divide en primi-
a) En los cuadros peritoníticos, con el propósito tivo y secundario.
de demostrar la presencia de pus, bilis, conte- El síndrome peritoneal primitivo es causado por
nido intestinal, orina o contenido gástrico. gérmenes que no provienen de los órganos intrab-
b) En los cuadros hemorrágicos intraperitonea- dominales y cuya procedencia no ha podido ser de-
les, para evidenciar la existencia de sangre que mostrada. El secundario se origina por la
no coagula. inflamación de vísceras abdominales o por líquidos
c) En el paciente politraumatizado. irritantes, ya sean químicos o sépticos, que caen
d) En los cuadros oclusivos, cuando se sospeche en la cavidad peritoneal. Se presenta en las
compromiso vascular. siguientes circunstan- cias:
e) En la pancreatitis aguda y en la trombosis me-
1. Inflamación de vísceras abdominales: apendi-
sentérica.
citis aguda, colecistitis aguda, diverticulitis,
colitis necrotizante, anexitis aguda, etc.
La punción abdominal siempre ayudará a confir-
2. Líquidos irritantes, químicos o sépticos, que
mar un diagnóstico, pero su negatividad no obliga a
ganan la cavidad peritoneal por perforación de
excluir la existencia de un abdomen agudo.
una úlcera gastroduodenal, cáncer gástrico, úl-
Clasificación cera yeyunal, enteritis regional, cáncer del co-
Existen varias clasificaciones del abdomen agudo, lon, diverticulitis del colon o del intestino
entre las que se encuentran las siguientes. delgado, colitis necrotizante; o que provienen
Prini lo clasifica en abdomen agudo de sintoma- de una tuberculosis intestinal, colecistitis agu-
tología definida, sintomatología indefinida y gran- da (coleperitoneo), absceso hepático, absceso
des dramas abdominales. subfrénico, fiebre tifoidea; o de una víscera
Christmann, en hemorrágico, perforativo, oclusi- hueca por traumatismo, colitis ulcerativa idio-
vo por íleo, oclusivo vascular e inflamatorio. pática, cáncer de la vejiga, útero por manio-
Dassaut, en peritoneal, oclusivo, hemorrágico y bras abortivas, piosalpinx, etc.
vascular.
Rodlles lo hace desde el punto de vista clinicopa- La gravedad del síndrome peritonítico depende
tológico, en oclusivo, peritoneal, hemorrágico, de de la extensión del proceso, germen que lo produce
y virulencia de éste, edad del paciente y estado de
torsión e isquémico o vascular.
salud previo al cuadro de abdomen agudo.
La escuela sajona, en peritonítico, oclusivo y he-
morrágico. Cuadro clínico
Existe una clasificación evolutiva del abdomen Síntomas subjetivos
agudo que lo divide en período de inicio, de estado 1. Dolor abdominal. El dolor puede ser de co-
y final. mienzo brusco o, por el contrario, progresivo.
La escuela cubana de Cirugía lo hace en peritoní- Su intensidad variará según el grado de irrita-
tico, oclusivo, hemorrágico y mixto o indefinido. ción que sufra el peritoneo; en las úlceras
En la actualidad hay tendencia a no clasificar el gastroduodenales perforadas, la irritación es tan
abdomen agudo. intensa, que el paciente compara el dolor con
Para la descripción de los síntomas y signos, uti- una puñalada. Inicialmente se localiza en la
lizaremos la clasificación cubana. región donde se originó el proceso inflamato-
rio; así, en la apendicitis aguda el dolor
comien-
322
za en el epigastrio o región umbilical, para lue- 3. Auscultación. La auscultación del abdomen
go irradiarse a la fosa ilíaca derecha. muestra ausencia o disminución de los ruidos
La propagación del dolor tiene una gran varia- hidroaéreos.
ción que depende de la causa del proceso; en 4. Tacto rectal o vaginal. Puede provocar dolor
líneas generales se puede señalar que los pro- por irritación del peritoneo pelviano. Ku-
cesos inflamatorios del hemiabdomen superior lenkampff lo describió como un signo siempre
se irradian hacia el hombro, espalda, base del presente en las úlceras perforadas.
hemitórax y flanco.
2. Vómitos. Generalmente están presentes y se Síntomas generales
acompañan de estado nauseoso; al inicio se La temperatura habitualmente se eleva por la carac-
deben a una irritación nerviosa refleja y luego terística infecciosa de este síndrome, con variacio-
al íleo paralítico establecido. Tienen la carac- nes según la causa del proceso. Tiene gran valor la
terística de no aliviar el dolor que los acompaña. disociación axilo-rectal en más de un grado. La ta-
3. Tránsito intestinal y micción. El tránsito intes- quicardia es otra manifestación del cortejo sintomá-
tinal disminuye generalmente por el estableci- tico y muchas veces no guarda relación con la
miento de un íleo paralítico. En las irritaciones elevación de la temperatura.
del peritoneo pélvico suele existir tenesmo rec- La presencia de la facies hipocrática (ojos hundi-
tal con expulsión de gleras y micciones frecuen-
dos, nariz afilada y mejillas deprimidas), acompa-
tes o dolor miccional.
ñada de un grado variable de deshidratación y
Síntomas objetivos alteración del equilibrio acidobásico, dependen del
1. Dolor. El dolor que produce la palpación del estadio evolutivo del síndrome.
abdomen es un signo característico de este sín-
drome; por lo general se localiza en el sitio don-
de se originó el proceso, aunque naturalmente
esto dependerá del estadio evolutivo. El dolor
SÍNDROME OCLUSIVO
Este síndrome se produce por la detención del libre
provocado por la descompresión brusca del ab-
tránsito por el intestino de heces y gases.
domen está presente; es la llamada reacción
Desde el punto de vista etiológico el síndrome
peritoneal, que si se localiza en la fosa ilíaca
oclusivo se clasifica de la siguiente manera:
derecha, recibe el nombre de signo de Blumberg
y, si es generalizado, signo de Gueneau de 1. Mecánico:
Musy. Otra característica palpatoria es la pre- a) Estrechamiento del calibre del intestino.
sencia de contractura abdominal, cuyo grado, De origen:
intensidad y duración variarán en dependencia • Inflamatorio.
de la naturaleza del proceso que la originó.
• Traumático.
Tanto la contractura como la intensidad del
• Vascular.
dolor imposibilitan los movimientos respirato-
rios abdominales, cosa que se detecta fácilmen-
• Tumoral.
te por inspección. La magnitud de la contractura b) Obstrucción de la luz del intestino.
está en relación directa con la naturaleza del Por :
líquido contaminante; la úlcera gastroduodenal • Parásitos.
perforada provoca el llamado “vientre en ta- • Cálculos.
bla”, expresión máxima de esta contractura por • Fecalomas.
el carácter en extremo irritante de ese líquido. • Cuerpo extraño.
2. Percusión de la pared abdominal. Esta manio- c) Compresión del intestino por bridas o
bra, a veces también realizada en la región lum- adherencias.
bar, exacerba el dolor (signo de Gassman). La De origen:
percusión de la región hepática puede demos- • Congénito.
trar ausencia de matidez por presencia de neu- • Inflamatorio.
moperitoneo (signo de Joubert).
323
• Traumático. yeyuno, y cuando su aspecto es fecaloideo, el
• Neoplásico. punto de oclusión está en el íleon o en el
d) Hernias internas o externas. colon.
e) Vólvulos. 3. Tránsito intestinal. Otro de los síntomas pri-
f) Invaginación. mordiales del síndrome oclusivo es la no ex-
g) Anomalías del desarrollo. pulsión de heces ni gases. Existen algunas
h) Compresión externa por neoplasia. variantes en las que el paciente mantiene el
trán- sito intestinal, como ocurre en las
2. Por desequilibrio nervioso: oclusiones altas, en las parciales y en las no
a) Íleo paralítico. muy bajas, en que se evacua el contenido del
b) Íleo espasmódico. intestino de la porción distal a la oclusión.
Otro dato impor- tante lo constituye la
3. Por obstrucción vascular: a) presencia de sangre en forma de gleras,
enterorragia (hematoquecia) o melena, como
Embolia mesentérica. b)
sucede en la invaginación, trombosis
Trombosis mesentérica.
mesentérica, divertículo de Meckel y
vólvulos.
Desde el punto de vista topográfico, las oclusiones
intestinales se clasifican en:
Síntomas objetivos
1. Oclusión del intestino delgado. 1. Inspección del abdomen. La inspección descu-
a) Alta (desde el duodeno hasta la primera asa bre un abdomen distendido en forma difusa o
yeyunal). localizada, en cuyo último caso aparece
asimé- trico (signo de Von Wahl). La oclusión
b) Baja (hasta la válvula ileocecal).
del íleon causa distensión de la parte central
2. Oclusión del intestino grueso.
del abdo- men, mientras que la del colon la
Cuadro clínico produce hacia los flancos. En los pacientes
delgados pueden observarse los movimientos
Síntomas subjetivos peristálticos del intestino a través de la pared
1. Dolor abdominal. Es uno de los síntomas más abdominal (signo de Boubereg); en el caso del
importantes, de aparición precoz, tipo cólico, intestino delgado, a través de la pared
de intensidad variable, localizado en el epigas- central del abdomen; mientras que la del
trio o región umbilical en las oclusiones del colon, los produce hacia los flancos.
intestino delgado y hacia la parte inferior del 2. Palpación del abdomen. No debe olvidarse
abdomen en las oclusiones del colon. El dolor nun- ca el examen sistemático de las
se debe al esfuerzo del peristaltismo por ven- regiones inguinocrurales para descartar la
cer el sitio del obstáculo. Cuando el dolor de la posilbilidad de una hernia; tampoco la
oclusión se torna sordo y mantenido, general- realización del tacto rectal o vaginal que
mente es debido a compromiso vascular. permita descubrir tumora- ción, invaginación,
2. Vómitos. El vómito en la oclusión intestinal no existencia de sangre, etc. El hallazgo de
es constante y su característica y frecuencia está zonas dolorosas en el abdomen con
en relación directa con el sitio de la oclusión; contractura y reacción peritoneal es índice de
así, el vómito es frecuente y copioso en las compromiso vascular.
oclusiones altas y va disminuyendo a medida 3. Percusión del abdomen. Permite apreciar el
que es más distal la oclusión; en ocasiones está gra- do de distensión aérea existente y
ausente o tiene una aparición tardía. Otro deta- diferenciar los aumentos de volumen
lle que se debe tener en cuenta es el contenido abdominales produ- cidos por otras
del vómito: si tiene grandes cantidades de bilis afecciones.
clara, la oclusión está próxima al ligamento de 4. Auscultación del abdomen. En la auscultación
Treitz; si es amarillo oscuro, está a nivel del se encontrarán los ruidos hidroaéreos
incremen- tados en intensidad y frecuencia,
así como la variación de los tonos; en las
oclusiones con abolición de los ruidos
hidroaéreos, debe sos- pecharse un íleo
paralítico o una oclusión con
324
muchas horas de evolución, en el que el intes- procesos ginecológicos, o en otras partes del
tino se agota y distiende sin producir ondas abdomen según la víscera lesionada; rápida-
peristálticas. mente se irradia al resto del abdomen o hacia
uno de los hombros, lo que constituye el signo
Síntomas generales de Laffont o dolor tardío elevado en el emba-
La magnitud de estos síntomas es directamente pro- razo ectópico roto, y el signo de Kehr o dolor
porcional al grado, tipo y tiempo de evolución de la referido al hombro izquierdo, en la ruptura
oclusión intestinal. Por lo general, la temperatura, esplénica.
el pulso y la tensión arterial se mantienen dentro de 2. Vómitos. De forma ocasional acompañan al
límites normales, pero pueden alterarse; también do- lor y se deben a la irritación
aparecen signos de deshidratación, desequilibrio provocada al derramarse la sangre en la
electrolítico y shock, en aquellos pacientes portado- cavidad peritoneal.
res de oclusión con compromiso vascular o perito- 3. Tránsito intestinal y micción. El tránsito intes-
nitis. tinal y el flujo urinario están disminuidos o
au- sentes, según la intensidad del cuadro.
Debe tenerse presente que en los embarazos
SÍNDROME ectópicos rotos, y debido a la irritación del
peritoneo pelviano, a veces aparecen
HEMORRÁGICO manifestaciones de tenesmo vesical o rectal,
que obligan a la pa- ciente a concurrir
El síndrome hemorrágico es producido por la pre- repetidas veces al baño sin efectuar ninguna
sencia de sangre libre en la cavidad peritoneal. evacuación de sus emuncto- rios, donde
Las causas más frecuentes de este síndrome son: puede sufrir caídas por la anoxia cerebral
causada por la anemia aguda.
1. Embarazo ectópico roto o fisurado.
2. Ruptura de un folículo o cuerpo amarillo. Síntomas objetivos
3. Ruptura de un quiste endometriósico. Durante el examen del abdomen se detecta la exis-
4. Ruptura de una víscera maciza de forma es-
tencia de dolor espontáneo a la inspiración profun-
pontánea o traumática.
da o a la tos, así como un aumento de volumen de
5. Ruptura de un aneurisma.
éste, que depende de la magnitud del sangramiento
6. Desgarro mesentérico de origen traumático.
7. Hemorragias posoperatorias. intrabdominal. El signo de Hoffstätter-Cullen-
Hellendal o coloración del ombligo, se observa en
La intensidad del cuadro clínico dependerá de la muy raras ocasiones. A la palpación, el abdomen
causa del síndrome, de la magnitud del sangramien- aparece algo tenso, no contracturado y con dolor a
to y del tiempo de evolución. la descompresión brusca. La percusión puede des-
Es importante la recolección de los antecedentes pertar dolor (signo de Stör) y demostrar matidez
en este tipo de paciente; en caso de traumatismo, de- clive cuando la cantidad de sangre
debe investigarse cómo se produjo, el tiempo trans- intrabdominal es apreciable. La matidez en el
currido, dirección y localización del golpe, etc. Cuando hipocondrio izquierdo, causada por la presencia
la causa del síndrome radica en la esfera ginecoló- de coágulos en la celda esplénica y no
gica, una amenorrea o cualquier alteración de la
desplazable con los cambios de posi- ción, es el
menstruación cobra gran importancia.
signo de Ballance, considerado como pa-
Cuadro clínico tognomónico de ruptura esplénica. El tacto vaginal
demuestra siempre un dolor intenso localizado en
Síntomas subjetivos
el fondo de saco de Douglas (signo de Proust), o
1. Dolor abdominal. Es el síntoma más constan-
te; suele ser de aparición aguda o bien paulati- tam- bién al desplazar el cuello del útero hacia
na, con localización hipogástrica en los delante
(signo de Banki) en el embarazo ectópico roto.
Tanto la punción abdominal como la del fondo
de
saco de Douglas son de valor innegable para el
diag- nóstico de este síndrome.
325
Síntomas generales atenuarse después de su inicio brutal, persiste casi
La pérdida del conocimiento, los mareos y la sed siempre, sin que el paciente presente alivio alguno.
intensa referida por estos pacientes, así como la pa- Los vómitos constituyen el síntoma constante y
lidez de la piel y las mucosas, la posible aparición casi siempre concomitan con el dolor o son conse-
de un shock hipovolémico acompañante, la hipoten- cutivos a éste. A menudo son frecuentes, a veces
sión, la taquicardia y una temperatura normal o hi- ininterrumpidos, incoercibles, y varían en sus ca-
potermia, constituyen el resto de los síntomas que racterísticas: primero son alimentarios y después
completan el cuadro clínico de este síndrome. biliosos o mucoacuosos, y a veces porráceos.
Las alteraciones del tránsito intestinal son menos
frecuentes que el dolor y los vómitos, y no tienen
SÍNDROME MIXTO un carácter absoluto, ya que se trata de un íleo
paralíti- co reflejo, o sea, que existe detención de
heces y gases, pero a veces incompleta.
Se denomina así por lo abigarrado del cuadro clíni-
co. Es producto de la mezcla de los signos y sínto-
Síntomas objetivos
mas de la peritonitis, la hemorragia y la oclusión.
A veces sucede que los síntomas objetivos no guar-
Las afecciones comprendidas en este síndrome son:
den relación directa con la intensidad de los fenó-
1. Pancreatitis aguda. menos funcionales y generales, lo cual constituye
2. Torsión del pedículo de anejos, tumores y quis- una paradoja que debe tenerse en cuenta. Por ello,
tes ginecológicos. los datos que aporta el examen físico del abdomen
3. Torsión del pedículo esplénico. son extremadamente variables en sus características.
4. Torsión del epiplón mayor. Es posible encontrar abombamiento de una región
5. Infarto del bazo y el epiplón mayor. determinada del abdomen, presencia o no de
6. Necrobiosis de fibromas uterinos. contracturas, meteorismo circunscrito o generaliza-
do, o matidez declive sobre una tumoración. El tac-
Cuadro clínico to vaginal permitirá apreciar tumoraciones anexiales
Síntomas subjetivos dolorosas en las pacientes portadoras de quistes tor-
El dolor abdominal generalmente es de aparición cidos del ovario.
brusca, intenso, a veces brutal, y se acompaña con
frecuencia de estado sincopal, todo lo cual guarda Síntomas generales
relación directa con las causas del síndrome. Se pue- Los síntomas generales, también variables, depen-
de haber presentado en otras ocasiones, aunque con derán de la causa del síndrome, la intensidad del
menos intensidad, y desaparecido con la misma brus- cuadro clínico y el tiempo de evolución.
quedad con que se instaló. Su localización inicial Inicialmente puede existir un estado de shock
por lo general está en relación con el órgano afecta- transitorio o per- manente, con pulso rápido,
do y posee la característica de que a pesar de tensión arterial normal o baja, y temperatura
elevada, normal o hipotermia.
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332
Cuarta Parte

ENFERMEDADES
DEL SISTEMA NERVIOSO
35
RECUENTO
ANATOMOFISIOLÓGICO DEL
SISTEMA NERVIOSO
El sistema nervioso es el supremo rector de nuestra nervios periféricos y craneales. Además, existe en
persona y constituye la culminación de incontables el sistema nervioso un tejido que cumple funciones
modificaciones evolutivas ocurridas a lo largo de la de sostén, trófica, de protección mediante la
historia filogenética de los organismos vivos. El llamada barrera hematoencefálica, de formación de
conocimiento preciso de su estructura y función son la mielina y macrofágica, entre otras. Es la
elementos obligados para todo aquel que se enfren- neuroglia, que está compuesta por una variedad de
te a un paciente con una afección neurológica, ya células: astrocitos o macroglia, oligodendroglias,
que uno de nuestros primeros cuidados debe ser tra- microglias, células del epéndimo, células de
tar de establecer con certeza un diagnóstico topo- Schwann y células satélites o capsulares de los
gráfico; es decir, conocer qué parte del sistema se ganglios raquídeos.
encuentra afectada, sin lo cual todo nuestro razona- Clásicamente se divide al sistema nervioso en
miento posterior carecerá de sentido lógico. dos partes, una central y otra periférica. El sistema
El sistema nervioso constituye el resultado del ner- vioso central está representado por el cerebro,
desarrollo progresivo de estructuras con un enorme el ce- rebelo, el tronco cerebral (mesocéfalo,
poder de excitabilidad, distribuidas en cada milíme- protuberancia y bulbo) y la médula espinal. El
tro del organismo y destinadas, por tanto, a poner sistema nervioso periférico de manera funcional se
en conocimiento de éste los cambios que constante- divide en sistema nervioso de la vida de relación,
mente se producen en su medio interno y externo, constituido por las raíces espinales, los ganglios
analizarlos y elaborar una respuesta de adaptación. raquídeos, los plexos nerviosos, los nervios
Esta cualidad, repetida de forma ininterrumpida en periféricos y craneales, y el sistema nervioso
cada segundo de nuestra existencia, da a este siste- vegetativo, visceral o autónomo, compuesto por
ma su carácter de sistema integrador de todas las los ganglios prevertebrales, paraver- tebrales, los
funciones. ramos comunicantes blancos y grises, los nervios
Su unidad anatómica y funcional es la neurona, esplácnicos o viscerales, y algunas por- ciones de la
célula constituida por el cuerpo celular, que recibe mayoría de los nervios periféricos y cra- neales.
la información y elabora la respuesta, y una serie de No obstante, es cada vez más frecuente encontrar
prolongaciones o expansiones, a veces muy largas. en los textos de Neuroanatomía, una división fun-
De estas prolongaciones, unas trasmiten en sentido cional del sistema nervioso, atendiendo a sus rela-
celulípeto llevando información y se denominan ciones directas aferentes y eferentes con el resto del
dendritas; otras, en sentido celulífugo, acarreando organismo o no. Así se distinguen el sistema nervioso
respuestas, que son los axones o cilindroejes. En la segmentario, constituido por la totalidad del
mayoría de los casos, cada neurona recibe varias sistema nervioso periférico, la médula espinal y
dendritas y emite un solo axón. Los cuerpos la mayor parte del tronco cerebral, y el sistema
neuronales constituyen la sustancia gris del encéfa- nervioso suprasegmentario, representado por el
lo y la médula espinal y las agrupaciones celulares cerebro, el cerebelo y algunos elementos del tronco
conocidas como ganglios (raquídeos y viscerales), cerebral. El sistema nervioso segmentario, como ya
mientras que las prolongaciones, reunidas en fas- se dijo, man- tiene relaciones directas aferentes y
cículos, forman la sustancia blanca del encéfalo y eferentes con el resto del organismo, y es
la médula espinal, y fuera de éstos, las raíces, plexos, responsable de recibir la mayor parte de las
sensaciones y de ejecutar las ór- denes emitidas por
el nivel superior. A esta parte del

335
sistema nervioso pertenecen la mayoría de los refle- forman el lemnisco medial y posteriormente termi-
jos incondicionados. Por su parte, el sistema nervio- nan también en el tálamo óptico. Desde el tálamo,
so suprasegmentario es aquel conjunto de estructuras ambas sensibilidades se proyectan hacia la corteza
nerviosas que mantienen relaciones directas aferen- cerebral, sobre todo a la corteza sensorimotora re-
tes y eferentes entre sí o con el sistema nervioso seg- trorrolándica o parietal ascendente y a otras zonas
mentario, sin conexiones directas con los segmentos menos definidas. El hecho de alcanzar el nivel
corporales. Su función es esencialmente integradora, cortical y, por tanto, hacerse conscientes para el in-
coordinadora y reguladora, para dar luego salida a dividuo, determina que estas modalidades de la
una respuesta hacia sí mismo o hacia el sistema ner- sen- sibilidad que se han descrito se conozcan
vioso segmentario. como sensibilidades conscientes.
Los aspectos que se tratan a continuación no in-
Área sensitiva
cluyen el sistema autónomo o visceral, por no ser
necesario para los propósitos de esta obra.
Sensibilidad Tálamo óptico
(tercera neurona sensitiva)
Las sensaciones de tacto, dolor y temperatura, inte-
grantes de la sensibilidad superficial (Fig. 35.1), son Pedúnculos
recogidas por los receptores correspondientes en los
tegumentos y llevadas por los nervios periféricos
hasta la médula espinal, donde hacen su entrada por Protuberancia
la raíz posterior (pasan previamente por el ganglio Haz espinotalámico
raquídeo, en el cual se encuentra la primera neurona
sensitiva). A nivel de los huesos, músculos, tendo- Bulbo
nes y articulaciones, se recogen por otros receptores Ganglio raquídeo
especializados impresiones propioceptivas, como el (primera neurona sensitiva)
sentido de presión, la sensibilidad vibratoria y el
Médula
sentido de las actitudes segmentarias, las que com- Núcleo de la sustancia
ponen la sensibilidad profunda, que siguen hasta la gelatinosa de Rolando
(segunda neurona sensitiva)
médula el mismo trayecto que las anteriores. De aquí
en adelante, las fibras que conducen la sensibilidad Fig. 35.1. Vías de la sensibilidad superficial.
dolorosa, térmica y táctil grosera o protopática, ha- Área sensitiva
cen sinapsis con la segunda neurona de esta vía, si-
tuada en la cabeza del asta posterior de la médula,
cuyos axones atraviesan la sustancia gris medular Tálamo óptico
(tercera neurona sensitiva)
(por delante del epéndimo, las vías de la sensibili-
dad táctil, y por detrás, las que llevan el dolor y la Pedúnculos
temperatura) y ascienden por el cordón anterolate-
ral de la médula del lado contrario, como haces
espinotalámicos ventral y dorsal, los cuales mante- Cinta de Protuberancia
Reil media
niendo una posición lateral a todo lo largo del tron- Núcleos de Goll y
co cerebral, alcanzan su tercera neurona a la altura Burdach
(segunda neurona Bulbo
del tálamo óptico. Las fibras que llevan la sensibili- sensitiva)
dad profunda, a las que se suma la sensibilidad tác- Haces de Goll y Ganglio raquídeo
til discriminativa o epicrítica (Fig. 35.2), ascienden Burdach (primera neurona sensitiva)

sin hacer sinapsis en el asta posterior, por el cordón


posterior de la médula del mismo lado en busca de Médula
su segunda neurona, ubicada en los núcleos de Goll
y Burdach en el bulbo, cuyos axones se entrecruzan, Fig. 35.2. Vías de la sensibilidad profunda consciente.

336
También en los músculos, tendones, huesos y ar- ner diferentes distribuciones corporales, las cuales
ticulaciones, se recoge por otro tipo de receptores orientarán hacia la topografía lesional.
especializados una variedad de sensibilidad, que se Una lesión del nervio sensitivo o de la raíz
origina particularmente por el estiramiento muscu- poste- rior, producirá un trastorno de la
lar y que asciende por el cordón lateral de la médula sensibilidad en el territorio de distribución
como haces espinocerebelosos directo y cruzado o respectivo. Si se lesionan muchos nervios
indirecto, para terminar en el cerebelo, y a la cual, periféricos en las cuatro extremida- des, el
por no tener el individuo conciencia de ella, se le trastorno sensitivo será bilateral, simétrico y distal;
llama sensibilidad profunda inconsciente (Fig. 35.3). esta distribución se conoce como en guante y
Asimismo, el aparato vestibular capta impresiones calcetín. Si la alteración ocurre en el centro de la
determinadas por los movimientos de la cabeza, que sustancia gris medular, se afectarán las vías que la
envía con preferencia al cerebelo, y la retina, impre- cruzan llevando sensibilidad superficial
siones visuales que van a la corteza occipital. El oído (fundamen- talmente la térmica y la dolorosa,
capta sensaciones auditivas y la mucosa olfatoria, puesto que la tác- til tiene vías más complejas) y
impresiones olfativas, que por vías preferenciales conservándose la profunda y táctil epicrítica que
llegan a la corteza auditiva primaria y al rinencéfalo, ascienden por el cor- dón posterior, lo cual se
respectivamente. El estudio detallado de estas com- conoce como disociación siringomiélica (Fig.
plejas vías lo encontrará el lector en los textos espe-
35.4). De dañarse sólo el cor- dón posterior, se
cializados.
pierde la sensibilidad profunda y táctil epicrítica
con indemnidad de la termoanalgé- sica
(disociación tabética). Un proceso que afecte una
mitad lateral de la médula espinal, producirá
anestesia profunda por debajo y en el mismo lado
Pedúnculos
de la lesión, y superficial en el lado contrario, tam-
Corteza cerebelosa bién por debajo de la lesión. Si hay una sección
Protuberancia
medular completa, habrá anestesia total por debajo
del sitio de la lesión. Si la lesión se encuentra a ni-
vel del bulbo o protuberancia baja, ocurrirá un tras-
torno sensitivo de la cara del mismo lado de la
lesión, y del tronco y miembros del lado opuesto;
pero si la
Haz espino- lesión es protuberancial superior, mesocefálica,
cerebeloso Bulbo
cruzado
Ganglio raquídeo Anastomosis de
Haz espino-
cerebeloso (primera neurona sensitiva) las fibras táctiles
directo Fascículo espinota- con segmentos
lámico ventral medulares
Médula
suprayacentes
Núcleo propio del asta posterior y Haz espinota-
columna de Clarke Cavidad lámico lateral
(segunda neurona sensitiva) siringomiélica

Fig. 35.3 Vías de la sensibilidad profunda inconsciente (vías


cerebelosas). Fibras cortas
destinadas a la
Trastornos de la sensibilidad. Los trastornos fun- termoalgesia
(interrumpidas)
damentales de la sensibilidad son las hiperestesias
Fibras medias
(exageración de la sensibilidad normal), las hipoes- del fascículo
tesias y anestesias (disminución o ausencia de una interno (tacto)
o varias modalidades de la sensibilidad), disestesias
y parestesias (sensaciones desagradables y espon- Fig. 35.4 Disociación siringomiélica de la sensibilidad. Las
táneas de hormigueo o escozor, o percepción de sen- sensibilidades térmica y dolorosa quedan interrumpidas al atra-
vesar la cavidad siringomiélica las fibras que las conducen,
saciones diferentes a las que cabe esperar según el pero la táctil se conserva, entre otros motivos porque sus fi-
estímulo aplicado). Cada uno de ellos puede referir- bras atraviesan la médula por delante de la cavidad, situada en
se a una o más modalidades sensitivas, así como te- la parte central de la médula espinal.

337
talámica o cortical, tendrá lugar una dificultad sen- inferior. De aquí en adelante continúa la orden por
sitiva de la mitad opuesta del cuerpo, incluyendo la la prolongación axónica de estas neuronas, o sea, la
cara. Si el trastorno se halla circunscrito a la región raíz anterior y el nervio periférico, hasta el músculo
perineal, en forma de silla de montar, la topografía que habrá de efectuar la contracción. El movimien-
lesional será en el cono medular o la cola de caba- to resultante es fino, preciso, adecuado al fin perse-
llo. Por último, no olvidar que la superposición de guido y susceptible de modificación por el influjo
los dermatomas que existen en el organismo, impi- de la voluntad. Más adelante, en el epígrafe Taxia
de en líneas generales la aparición de un trastorno se insistirá sobre esto.
sensitivo cuyo límite sea exactamente la línea me-
dia del cuerpo; ante su aparición, se debe estar siem- Área motora

pre alerta por la posibilidad de un trastorno de índole


psicógena. Cerebro

Motilidad
La respuesta del organismo vivo ante los estímulos
puede ser motora, secretora o de otra naturaleza. Haz piramidal Pedúnculos
Ahora sólo nos interesa la respuesta motora y será
Protuberancia
analizada a través de la motilidad.
Bulbo
La motilidad es de dos tipos: cinética o motilidad Haz piramidal
propiamente dicha y estática o inaparente. La pri- directo
mera está representada por el movimiento, o sea, el Haz piramidal
cruzado Médula
desplazamiento del cuerpo o de una parte de él me- Neurona motora
diante contracciones musculares, y la segunda, por periférica
la postura, la cual es obra del tono muscular. Los
movimientos son voluntarios e involuntarios. A su
vez, entre estos últimos se distinguen varias catego-
rías, tales como los reflejos y los movimientos auto-
Fig. 35.5 Vía piramidal.
máticos.
Trastornos de la motilidad voluntaria. Una in-
Movimiento voluntario terrupción del impulso motor en cualquier sitio de
El movimiento voluntario se realiza a través de la su recorrido, impedirá la realización del movimien-
vía piramidal (Fig. 35.5). Una vez decidida su eje- to, y de hecho, se producirá una parálisis parcial o
cución, la orden parte de las células piramidales gi- total. Cuando la lesión está situada en la corteza,
gantes de Betz, situadas en la circunvolución frontal provocará una parálisis de una parte del
ascendente y de otras neuronas en la circunvolución hemicuerpo contralateral, ya que en ese lugar las
parietal ascendente, y otras partes de los lóbulos pa- fibras del haz piramidal están muy dispersas y es
rietal y frontal; todo este conjunto de neuronas reci- muy difícil que se afecten en su totalidad. Si la
be el nombre de neurona motora central o superior lesión es en la cáp- sula interna, como ya se
y sus axones constituyen el haz piramidal o reunieron las fibras piramidales, se producirá una
corticospinal, el cual discurre por el centro oval, la parálisis del hemicuer- po y cara contralaterales
cápsula interna y el tronco cerebral, y a este nivel da (hemiplejía directa). Si la afectación está a nivel
inervación a los núcleos motores de los pares cra- del tronco encefálico, habrá una parálisis del
neales contralaterales. En el bulbo, la mayor parte hemicuerpo contralateral y de un par craneal del
de las fibras del haz piramidal se decusan, por lo mismo lado de la lesión (hemiplejía alterna).
que en la médula espinal habrá un haz corticospinal Cuando se daña la mitad lateral de la mé- dula,
cruzado y otro directo, de menor tamaño. Ambos tendrá lugar una parálisis por debajo y del mis- mo
hacen sinapsis con las neuronas motoras del asta lado de la lesión, porque ya las fibras piramidales se
anterior de la médula espinal, las que en su conjunto cruzaron. Por supuesto, si la médula se afecta en
reciben el nombre de neurona motora periférica o todo su ancho, habrá parálisis en ambos lados por
debajo de la lesión. Si es en las raíces anteriores,
los

338
plexos o los nervios periféricos, el defecto motor se acompañan de hipertonía, puesto que éstos son cen-
evidenciará en el territorio de distribución corres- tros inhibidores. En cambio, las lesiones del
pondiente. Si la lesión asienta en el efector muscu- aparato vestibular, la formación reticular, la oliva
lar, la debilidad se manifestará en el o los músculos bulbar y los hemisferios cerebelosos, que actúan
afectados. como faci- litadores, producirán hipotonía
muscular. En el caso de daño de la médula espinal,
Tono muscular si ocurre una lesión lentamente progresiva, por lo
La motilidad estática o inaparente está representada general hay hiperto- nía, que se va instalando poco
por la postura o actitud y gobernada por el tono a poco, al liberarse la médula de la influencia
muscular. Una vez que el movimiento ha cesado, es reguladora de los supraseg- mentos. Si por el
necesario mantener una actitud determinada, lo cual contrario, es súbita, causa el lla- mado shock
se consigue mediante el tono muscular, estado de medular con hipotonía, que en el transcurso de
semitensión que conserva el músculo vivo aun es- semanas o meses va dejando paso a una hipertonía
tando en reposo. El tono muscular es un fenómeno por el mecanismo ya explicado. Taxia
reflejo que se origina por estímulos propioceptivos Cuando se realiza un movimiento voluntario, apa-
que nacen en el mismo músculo, y es el estiramien- rentemente se contrae sólo el músculo encargado
to pasivo de éste el estímulo más importante. Di- de dicho movimiento, pero en realidad no es así,
chos impulsos alcanzan los receptores especializados sino que intervienen muchos otros, cada uno con
correspondientes (husos neuromusculares, órgano distinta función. Tomemos el ejemplo clásico: la
tendinoso de Golgi) y son conducidos por las fibras flexión del antebrazo sobre el brazo; en este
sensitivas de los nervios periféricos y las raíces pos- movimiento se con- trae el bíceps, pero también lo
teriores hasta la médula espinal, en cuya sustancia hace el braquial ante- rior para facilitar el trabajo
gris se encuentran los circuitos neurales correspon- de aquél, y se relaja el tríceps (músculo con
dientes, representados por las motoneuronas del asta función opuesta a la del bí- ceps) para no
anterior medular que elaboran la respuesta tonígena entorpecer el trabajo, y además, se contraen los
y la envían al músculo a través de la raíz anterior y músculos de las articulaciones vecinas para fijarlas
los nervios motores. y permitir que el movimiento sea más preciso
Como ocurre con todo tipo de actividad segmen- (inervación recíproca). Para que toda esta
taria, existen niveles nerviosos superiores que con- actividad se realice de una forma armónica, es
trolan estos circuitos neurales, unos facilitándolos y nece- sario que exista un conjunto de estructuras
otros inhibiéndolos. Actúan como centros facilita- nervio- sas encargadas de llevar a cabo la
dores, entre otros, el aparato vestibular, la forma- coordinación muscular o taxia. A continuación se
ción reticular, la oliva bulbar y los hemisferios recordará el fun- cionamiento de estas estructuras.
cerebelosos; mientras que el vermis cerebeloso, la Las impresiones propioceptivas recogidas en los
corteza cerebral, el núcleo rojo y el globo pálido, músculos, tendones, huesos y articulaciones, infor-
entre otros, se comportan como inhibidores. man continuamente a la corteza cerebral sobre la
Trastornos del tono muscular. Cualquier afección posición de los miembros y el tronco (sensibilidad
que interrumpa el arco reflejo, producirá una dismi- profunda consciente) y al cerebelo sobre el tono
nución del tono muscular o hipotonía. Ésta se en- muscular (sensibilidad profunda inconsciente). De
cuentra en las lesiones de los nervios periféricos, igual forma las impresiones recogidas por el apara-
to vestibular lo hacen a la corteza y al cerebelo so-
tanto sensitivos como motores, en las enfermedades
bre la posición de la cabeza en cada momento, y las
del cordón posterior, de las raíces anteriores y pos-
impresiones visuales recogidas por la retina infor-
teriores, de los plexos y del soma de las motoneuro-
man de manera constante a la corteza sobre los mo-
nas del asta anterior. Naturalmente, también habrá
vimientos y posición relativas del cuerpo y los
hipotonía en las afecciones de los músculos, toda objetos circundantes.
vez que en este caso estará lesionado el órgano Una vez conocidas las diferentes partes de este
efector. complicado mecanismo, se está en disposición de
Las enfermedades del vermis cerebeloso, el nú- comprender cómo funciona. Cuando se decide la
cleo rojo, la corteza cerebral y el globo pálido, se
339
realización de un movimiento, la corteza motora Las lesiones vestibulares ocasionan ataxia, ya que
envía la orden que a través de la vía piramidal al- se trastorna la comunicación a la corteza y al cere-
canza la neurona motora periférica y luego los múscu- belo sobre la posición de la cabeza en el espacio.
los efectores. Pero simultáneamente con esta orden La oclusión de los ojos agravará el fenómeno,
y a través de vías frontopontocerebelosas, la corteza pues la vista suple parcialmente esta falta de
informa al cerebelo sobre sus intenciones. El cerebe- información. Otras lesiones de distinta
lo, a su vez, por medio de las vías cerebelo-vestíbu- localización también
lo-espinales, cerebelo-retículo-espinales y cerebelo- producen ataxia, pero con menos frecuencia.
rubro-espinales, actúa sobre la médula espinal, y re- Movimientos involuntarios
gula y ajusta el tono de los diferentes músculos que Movimientos reflejos
intervendrán en el movimiento. Iniciado éste, en los
Entre los movimientos involuntarios, el más senci-
huesos, tendones, músculos y articulaciones se pro-
llo y elemental de todos es el reflejo, el cual se
ducirán estímulos propioceptivos conscientes que por
las vías espinotalamocorticales comunicarán de for- defi- ne como una respuesta motora rápida e
ma constante a la corteza sobre la actitud segmenta- involuntaria ante la aplicación de un estímulo
ria, así como otros de tipo inconsciente, que mediante apropiado. Los re- flejos son de dos tipos:
los haces espinocerebelosos mantendrán también osteotendinosos o profun- dos, entre los cuales
informado en todo momento al cerebelo sobre el se encuentran el bicipital, tricipital, rotuliano,
estado de tensión, relajación o contracción de los estilorradial, cubitopronador, aquiliano, etc., y
músculos. Igualmente, el aparato vestibular y la vis- cutaneomucosos o superficiales, como el corneal,
ta lo harán sobre la posición de la cabeza, el cuerpo fotomotor, cremasteriano, cuta- neoabdominales,
y los objetos. cilioespinal, etc.
La corteza, siempre informada de la actividad seg- El movimiento reflejo necesita para producirse la
mentaria, mantiene la orden de contracción muscu- presencia del llamado arco reflejo, el cual está
lar y el aviso al cerebelo de sus intenciones, y éste, cons- tituido por los elementos siguientes: una
también enterado, continúa su regulación sobre el rama aferente, formada por el receptor y las vías
tono muscular y envía impulsos coordinadores a la sensiti- vas que conducen el estímulo; un centro
corteza motora por medio de la vía cerebelo-tála- integrador del reflejo, que recibe el estímulo y
mo-cortical, y así sucesivamente. De esta manera el elabora la res- puesta, formado por el sector
movimiento resultante no sólo es potente y vigoro-
intercalado del seg- mento correspondiente, y
so (vía piramidal), sino también fino, armónico, co-
una rama eferente o motora, que lleva la
ordinado y adecuado al fin propuesto.
respuesta al órgano efector. Este arco reflejo, al
Trastornos de la taxia. Constituyen lo que se de-
igual que ocurre con todas las fun- ciones
nomina una ataxia y sus causas son muy variables.
segmentarias, recibe el control de centros ner-
Producen ataxia las lesiones del cordón posterior,
viosos superiores, fundamentalmente de tipo
porque al interrumpirse la información propioceptiva
inhibitorio, a través de la vía piramidal. Es muy im-
consciente, la corteza cerebral sólo adquiere con-
portante destacar en este punto que la totalidad de
ciencia de la actitud y postura del cuerpo mediante
los reflejos osteotendinosos explorados en clínica
el sentido de la vista; por esta razón, la ataxia se
constituyen el llamado reflejo miotático, de
agrava cuando el enfermo cierra los ojos. Se puede
caracte- rísticas peculiares en el sistema nervioso
ver, con iguales características, en las lesiones de
por su cua- lidad de ser bineuronal y
los nervios sensitivos periféricos y raíces poste-
monosináptico; el resto de los reflejos existentes
riores.
en el sistema nervioso son polineuronales y
Las lesiones del cerebelo y sus vías causan ataxia
polisinápticos.
porque perturban la regulación del tono muscular.
Un mismo estímulo actuando sobre el mismo si-
Como en este caso la vía propioceptiva consciente
mantiene informada a la corteza acerca de la posi- tio, produce siempre igual respuesta, y en esto radi-
ción del cuerpo, la oclusión de los ojos no agrava la ca el valor que tienen los reflejos en medicina
ataxia. clínica para localizar lesiones, puesto que si se
modifica un reflejo que previamente era normal, se
puede presu- poner, conociendo el centro de
integración de éste y sabiendo que las vías
aferentes y eferentes están in- demnes, el probable
sitio de asiento de la lesión.
340
Trastornos de los reflejos. Las lesiones de la vía voluntaria, existe otro sistema más difuso y com-
piramidal exacerban los reflejos osteotendinosos, plejo, no sólo anatómica, sino también funcionalmen-
puesto que cesa el control inhibitorio que aquella te: el sistema extrapiramidal, que en líneas
ejerce sobre éstos. Por el contrario, los reflejos su- generales regula los movimientos de tipo
perficiales disminuyen o desaparecen, al cesar el automático, además de intervenir en el control del
efecto facilitador de la vía piramidal sobre ellos. tono muscular.
También se produce hiporreflexia o arreflexia
Área
cuando se interrumpe el arco reflejo por lesiones en premotora
las vías aferentes o eferentes, o sea, cordones poste-

Núcleo caudado
Putamen
riores de la médula, nervios periféricos y craneales, Pallidum Tálamo óptico
raíces, neurona motora periférica o en el propio
Núcleo rojo
músculo. Locus niger
Haz rubrospinal
Movimientos automáticos Sustancia reticular
Existe una serie de movimientos que también se rea-
lizan sin intervención de la voluntad consciente, más Haz reticulospinal
complejos que los movimientos reflejos y que se directo y cruzado
denominan movimientos automáticos. Como ejem-
plo de ellos están el balanceo rítmico de los brazos Neurona motora
periférica
al caminar, la realización de una serie de maniobras
de forma impensada por un chofer al conducir, la Fig. 35.6. Vías extrapiramidales.
deglución periódica que se hace de la saliva, etc.
Todos estos actos y muchos más son regidos por el Una vez conocidos los integrantes de este com-
sistema extrapiramidal. plicado sistema, se verá sucintamente como funcio-
El sistema motor extrapiramidal o estrio-pálido- na. Las eferencias procedentes de diferentes partes
subtalámico está representado por una serie de com- de la corteza frontal, alcanzan los núcleos caudado
plejas estructuras suprasegmentarias, estrechamente y putamen, los cuales las proyectan hacia el globo
relacionadas entre sí por abundantes interconexio- pálido. El globo pálido, a su vez, emite eferencias
nes y con numerosas relaciones aferentes y eferentes hacia el núcleo rojo, la sustancia nigra, la
con la corteza cerebral, el cerebelo, el tálamo y los formación reticular y la oliva bulbar, que las
segmentos del tronco cerebral. Representa el siste- proyectarán hacia la médula espinal en los haces
ma motor más antiguo en la evolución de las espe- respectivos. También el globo pálido manda
cies, que aunque en los mamíferos superiores y en eferencias directas hacia el tálamo, el cual las
especial en el hombre fue desplazado por el enorme enviará de vuelta a la corteza ce- rebral para su
desarrollo de la corteza cerebral, conserva no obs- análisis. Por otra parte, el cerebelo, centro
tante un alto grado de responsabilidad en la ejecu- regulador por excelencia del tono muscular y de la
ción de los actos motores, como se verá luego. Se precisión de los movimientos, también recibe
cree que está implicado en la “generación interna” influencias corticales, lo que cierra un circuito
del movimiento, en la ejecución automática de los córtico-ponto-cerebelo-rubro-tálamo-cortical.
planes motores y en la adquisición y retención de De esta forma, los impulsos extrapiramidales al-
los programas motores. canzan la neurona motora inferior y por medio del
Sus componentes anatómicos fundamentales son: cilindroeje de éstas llegan al músculo efector. Re-
el núcleo caudado y el putamen, conocidos en su sulta conveniente recordar aquí una característica
conjunto como cuerpo estriado o striatum, el globo importante del sistema nervioso con respecto a la
pálido, el núcleo subtalámico de Luys, la sustancia motilidad en general: la diversidad de incitación se-
nigra, el núcleo rojo y la formación reticular gún el tipo de movimiento (corteza motora para el
subtalámica (Fig. 35.6). Por lo tanto, de forma para- movimiento voluntario, centros extrapiramidales
lela a la vía piramidal, responsable de la motilidad para el automático, estímulo periférico para el
refle- jo) y la unidad de ejecución, ya que el aparato
efector

341
es siempre el mismo, o sea, la neurona motora peri- extremidad o de la cabeza; hay contracción al-
férica o inferior. Por ello Sherrington la denominó terna de músculos agonistas y antagonistas. Su
vía común final. sustrato anatómico son las lesiones del globo
pálido, la sustancia nigra o sus vías, el núcleo
Trastornos del sistema extrapiramidal dentado del cerebelo o el núcleo rojo, al in-
Los trastornos del sistema extrapiramidal son tan terrumpir la vía cerebelo-rubro-tálamo-cortical.
complejos en su expresión clínica como la anatomía e) Mioclonias: son movimientos
y función de las estructuras cuya lesión les da ori- irregulares, arrítmicos, muy rápidos, que
gen. En muchos casos no se conoce a ciencia cierta abarcan desde la sacudida de un músculo
la topografía lesional, ya que las intrincadas conexio- aislado hasta despla- zamientos de grupos
nes existentes provocan que lesiones en diferentes musculares; pueden exa- cerbarse por
sitios produzcan los mismos síntomas. Las princi- estímulos auditivos, luminosos o táctiles
pales alteraciones consisten en la pérdida de los intensos. Constituyen un trastorno com- plejo
movimientos automáticos, aparición de movimien- en cuya génesis están involucradas lesio- nes
tos anormales espontáneos y trastornos del tono corticales, cerebelosas, de la oliva bulbar y
muscular. del tálamo, entre otras.
Los movimientos anormales son:
Los trastornos del tono muscular son:
a) Movimientos coreicos: son desordenados, rá- a) Rigidez parkinsoniana: consiste en una hiper-
pidos, irregulares, asincrónicos, sin ritmo, y tonía que, al movilizar pasivamente las extre-
afectan por igual las extremidades, la cara y el midades, cede poco a poco, signo conocido
tronco. Son producidos por lesión del striatum, como de la “rueda dentada”. Se debe a lesio-
fundamentalmente la cabeza del núcleo cau- nes del globo pálido, sustancia nigra y forma-
dado. ción reticular.
b) Hemibalismo: los movimientos son más am- b) Hipotonía marcada: por lesión del striatum, fun-
plios y bruscos, que por lo general afectan una damentalmente la cabeza del núcleo caudado.
sola extremidad. Se producen al lesionarse el c) Distonías: son movimientos bruscos,
núcleo subtalámico de Luys o sus conexiones espasmó- dicos, con participación de la
con el globo pálido. cabeza, el cue- llo, el tronco y las
c) Atetosis: son ondulantes, lentos, con predomi- extremidades, que quedan fijas en una
nio distal en las extremidades, pero que pue- posición forzada por un período de tiempo,
den afectar la cara, el cuello, la lengua y otros para cesar de forma súbita y volver a
grupos musculares. A menudo se combinan con comenzar el ciclo. Se ven en las lesiones del
los movimientos coreicos, entonces son los lla- striatum, sobre todo del putamen.
mados movimientos coreoatetósicos. Aparecen d) Rigidez de descerebración: consiste en un es-
al lesionarse el striatum. tado de extensión tónica de las extremidades
d) Temblores: son oscilaciones rítmicas involun- superiores e inferiores con opistótonos. Se ob-
tarias, de poca amplitud, por lo general de una serva en lesiones bilaterales del tegmento
mesocefálico, a nivel del núcleo rojo o entre
éste y los núcleos vestibulares.
342
36
CEFALE
A
La cabeza es el sitio que con mayor frecuencia due- b) Seno transverso.
le en el cuerpo. Entre el 70 y 80 % de la población, c) Seno occipital.
tanto hombres como mujeres, experimentan cefa- d) Prensa de Herófilo.
lea, y así tenemos que de forma aproximada el 50 % e) Vena de Labbé.
de ella aqueja dolor de cabeza al menos una vez al 9. Recubrimiento pioaracnoideo de las arterias
mes, el 15 % una vez por semana y el 5 % a diario, de la base.
ya sea formando parte de un cortejo sintomático o 10. Polígono de Willis y grandes arterias cerebra-
como síntoma único, que puede ser la expresión de les:
un proceso tan grave como un tumor cerebral o sim- a) Cerebral anterior.
plemente la traducción clínica de un fenómeno tan b) Cerebral media.
banal como una fatiga.
c) Cerebral posterior.
Concepto d) Tronco basilar y sus ramas.
11. Troncos nerviosos craneales con función sen-
Cefalea es toda sensación dolorosa que tiene lugar sitiva.
en la parte superior de la cabeza, desde el reborde
orbitario hasta la nuca. Patogenia general de la cefalea
El cráneo, el parénquima cerebral y la mayor parte
Estructuras que duelen en la cabeza de la duramadre, piamadre y aracnoides, así como
Desde los trabajos de Ray y Wolf (1940), quedó
el revestimiento ependimario de los ventrículos y
demostrado que en la cabeza pueden doler las es-
los plexos coroideos, son insensibles a los
tructuras siguientes:
estímulos dolorosos. Cuando las lesiones encefálicas
1. Piel y tejido celular subcutáneo de toda la ca- causan ce- falea, es debido a que involucran alguna
beza. estructura intracraneal de las mencionadas
2. Músculos del cuero cabelludo y la nuca. anteriormente como capaces de producir dolor.
3. Arborizaciones de las arterias y venas extra- La rica inervación de las estructuras superficiales
craneales, especialmente de la arteria tem- permite localizar la cefalea con precisión, y así, en
poral. la arteritis temporal se produce el dolor en el lado
4. Periostio extracraneal. de la arteria lesionada. Si la estructura superficial
5. Arteria meníngea media en su recorrido dural. se afecta de manera difusa, la cefalea es de
6. Duramadre en: localiza- ción difusa. Esto es lo que sucede en
a) Porción vecina a los senos venosos longitu- algunos ata- ques migrañosos en los cuales
dinal, occipital y transverso. el dolor es generalizado, ya que la vasodilatación
b) Suelo de la fosa anterior. también lo es. Si están involucradas estructuras
c) Suelo de la fosa posterior. profundas, la localización de la cefalalgia será
7. Cara superior e inferior de la tienda del cere- menos precisa. Un ejemplo de ello lo constituye la
belo. consecutiva a la in- flamación del seno esfenoidal,
8. Principales senos venosos: la cual puede estar entre ambos ojos, aunque
a) Seno longitudinal superior.
también ser referida al
vértex cefálico.

343
Si existe una lesión intracraneal, el dolor suele • Ataque unilateral.
tener una localización muy imprecisa, a veces aleja- • Carácter pulsátil.
da de la afección; es así como un tumor en la fosa • Intensidad de moderada a severa.
media es capaz de producir una cefalea de localiza- • Empeoramiento con la actividad física.
ción frontal, pues tanto la fosa anterior como la me- • Intolerancia a los ruidos y a la luz.
dia tienen inervación sensitiva proveniente del V par • Síntomas digestivos acompañantes: náuseas
a través de la rama oftálmica. y vómitos.
2. Migraña con aura. Mucho menos frecuente que
Clínica de la cefalea la anterior, llamada antiguamente migraña clá-
Hay un gran número de procesos muy diferentes sica; se caracteriza por la aparición de un aura
entre sí, que producen dolor de cabeza y, por lo tan- neurológica antes del inicio del ataque, lo cual
to, las manifestaciones clínicas tienen sus particula- le otorga criterio diagnóstico. De forma típica
ridades. el aura consiste en la visión de luces resplan-
decientes o de figuras bien formadas, que co-
Cefalea vascular o migraña mienzan en una parte del campo visual y se
No es una entidad clínica, sino un grupo de desór- extienden de forma lenta al resto de éste.
denes que tienen en común las siguientes caracterís- Otras variedades de auras visuales
ticas: comprenden: es- cotomas centelleantes, visión
• Predisposición constitucional. En un número ele- de llamaradas y, con menor frecuencia,
vado de pacientes con migraña se recogen ele- hemianopsia.
mentos que permiten detectar una historia de En ocasiones, los síntomas están precedidos
migraña. de parestesias de la cara, boca o labio
• Patrón repetitivo unilateral o bilateral, con au- superior, que duran de 15 a 30 min y son
sencia de síntomas entre los ataques. sustituidos por una cefalea pulsátil que con
• Aparición, conjuntamente con la cefalea, de frecuencia se acom- paña de náuseas y
cambios neurológicos variables de mayor o vómitos.
menor importancia. Algunas personas, horas o días antes del ata-
• El primer ataque migrañoso suele ocurrir du- que, experimentan cambios en la conducta,
rante la infancia o la adolescencia, y aunque pue- como depresión, hiperactividad, júbilo o apetito
de comenzar a cualquier edad, no es común que exagerado para algunos alimentos. Estos sín-
lo haga después de la quinta década de la vida. tomas prodrómicos sugieren participación ta-
Cuando esto ocurre, debe buscarse otro diag- lámica o límbica en la patogenia de la
nóstico. migraña. Muchos ataques migrañosos se ven
• Predominio de la afección en el sexo femenino, precipita- dos por el stress, iluminación
con una relación de 3:2; posiblemente hay en brillante, mens- truación, alcohol, o comidas
esto la influencia de factores hormonales, entre como el chocolate o el queso. Los
los cuales la menstruación, al parecer, desem- contraceptivos orales pueden incrementar el
peña un papel importante como precipitante de riesgo de alteraciones neuroló- gicas
los ataques. permanentes, como hemianopsia o hemi-
paresia que ocurren durante el ataque de
Manifestaciones clínicas migraña con aura.
La cefalea vascular o migraña puede ser de dos ti-
pos: migraña sin aura y migraña con aura. Fisiopatología
1. Migraña sin aura. Es la antiguamente llamada En ella se incluyen aspectos neurológicos, vascula-
migraña común y la forma más frecuente. Con- res y químicos.
siste en ataques múltiples de cefalea que du- Algunos autores opinan que la cefalea migrañosa
ran, sin tratamiento, desde algunas horas hasta es consecuencia de la dilatación e inflamación
varios días, y que presentan, además, por lo aséptica de los vasos arteriales intra y extracranea-
menos dos de los siguientes caracteres: les, producidas por sustancias tales como serotoni-
na, estrógenos, alcohol, etc.; una patogenia
puramente vascular que, sin embargo, es insuficien-
te para dar explicación a todos los fenómenos que
344
aparecen en la migraña, incluida el aura, por lo que Manifestaciones clínicas
el cerebro debe participar. El aura de la migraña está De forma típica, el ataque comienza durante el sue-
asociada con una disminución de la irrigación cere- ño, despierta al paciente y lo fuerza a levantarse
bral, que comienza en el lóbulo occipital y se propa- quejándose, a diferencia del enfermo migrañoso
ga hacia adelante a través de la corteza, y se cree que permanece quieto en el lecho. Es un dolor
que es el resultado de alteraciones primarias en el profun- do, localizado siempre en la misma zona de
metabolismo y función cortical. la cabe- za y el cuello, que involucra un ojo, la
Moskowitz ha enfatizado que el V par, en sus re- sien, la frente y la mejilla. A ello se asocia
laciones con los vasos sanguíneos craneales, es mu- lagrimeo y enrojeci- miento del ojo afectado, así
cho más que un conductor pasivo de los impulsos como ptosis palpebral contralateral, y en algunos
dolorosos de los vasos al tallo cerebral. El tráfico casos, miosis de este ojo
neural en el V par puede ser también en sentido (un síndrome de Claude Bernard-Horner incomple-
opuesto, con impulsos del tallo cerebral que inciden to), y rinorrea contralateral. Las náuseas son poco
en los vasos sanguíneos, y mediante la liberación de comunes y el vómito es infrecuente. Después de fi-
sustancia P y otros péptidos producen dilatación e nalizar la crisis, el paciente cae en un sueño profun-
inflamación vascular. Estos cambios neurogénicos do que dura varias horas, al cabo de las cuales
vasculares pudieran generar dolor que se trasmite despierta con otro ataque.
por el V par hacia el tallo cerebral. A pesar de que esta cefalea muestra predilección
Por otro lado, está demostrado que durante el ata- por el horario nocturno para su presentación, hay
que de migraña ocurre una disminución de serotoni- ocasiones en que ocurre durante el día, sobre todo
na y si ésta es restituida a sus valores normales si la persona ingiere bebidas alcohólicas.
mediante inyección EV, se logra abortar el ataque
de migraña. Fisiopatología
Los trabajos de Moskowitz también demostraron No se conoce, pero su origen se atribuye a espas-
que sustancias que estimulan los receptores de sero- mos periódicos, edema o inflamación de la carótida
tonina localizados en las terminaciones postsinápti- interna cerca de la base del cráneo. Muy poco se
cas del V par, son capaces de inhibir la liberación de sabe sobre los mecanismos químicos
sustancia P y así prevenir o revertir la vasodilata- concomitantes en la producción de este tipo de
cefalea.
ción e inflamación de los vasos sanguíneos cere-
brales. Cefalea de tipo tensional
Este efecto ha sido demostrado con el agonista
Hasta hace algún tiempo se aceptaba que este tipo
selectivo de la serotonina, el sumatriptán, pero tam-
de cefalea, la más común, era consecuencia de una
bién con la dihidroergotamina, que es un agonista
contractura mantenida y dolorosa de los músculos
no selectivo. Ambos medicamentos han mostrado del cuero cabelludo y la nuca, como expresión
clara eficacia para yugular los ataques agudos de somática de una tensión psíquica. Los estudios
migraña. elec- tromiográficos han mostrado un aumento de
la acti- vidad de estos músculos durante la
Cefalea arracimada o agrupada
cefalea por contractura muscular, pero de igual
Muestra predilección por el sexo masculino, comien- manera, esto pue- de no ocurrir.
za generalmente en la tercera o cuarta década de la En ocasiones se detecta mayor actividad electro-
vida y su nombre proviene de la tendencia que tiene miográfica en un ataque de migraña que durante
a que sus ataques se agrupen en el tiempo; así, un otro de cefalea tensional.
paciente portador de una cefalea agrupada sufre a
veces hasta 8 o más ataques de cefalea cada día du- Manifestaciones clínicas
rante semanas o meses, los que entonces cesan para La cefalea de tipo tensional tiende a ser bilateral,
reaparecer de nuevo pasados algunos meses o años. no pulsátil, poco intensa y embotante; su
Cuando el cuadro cefalálgico se repite a diario y no localización puede ser frontal o nucoccipital y en
termina el agrupamiento, entonces se produce una algunas oca- siones se describe como “un peso en
cefalea arracimada crónica. el centro de la cabeza”, “una banda opresiva
alrededor de la cabe- za”, o como “algo que se
expande en el interior de
345
la cabeza”. No suele haber náuseas y, si se presen- Arteritis temporal
tan, en general están en relación con efectos colate- Se caracteriza por lo siguiente:
rales de la medicación. Nada parece agravar esta a) Comienza después de la quinta década de la
cefalea, excepto una mayor carga de stress o de fati- vida.
ga, ni nada beneficiarla, salvo eliminar ambas situa- b) Es producida por una enfermedad evidente.
ciones. c) Su gravedad.
La evolución es variable; de un lado está una par-
te importante de la población que de manera ocasio- Esta arteritis progresiva afecta las arterias del
nal sufre cefalea como respuesta a un estado de stress cue- ro cabelludo y produce cefalea, pero además
o de fatiga reconocible y que responde con rapidez lesio- na otras arterias, incluidas aquellas que
a la supresión de éste y con la ingestión de analgési- irrigan los ojos y el cerebro; es esta la explicación
cos simples. En otro grupo se encuentran los pacien- de por qué una parte importante de los pacientes no
tes habitualmente tensos, preocupados o deprimidos, tratados evo- lucionan hacia la ceguera.
que con frecuencia padecen de cefalea recurrente, De forma típica el dolor se describe como un
pero que están bien la mayor parte del tiempo. Estas malestar intermitente o una sensación de ardor que,
personas tienen conciencia de la relación entre sus invariablemente y de forma constante, durante se-
síntomas y su modo de vida, y casi siempre respon- manas y meses, aumenta su intensidad y se
den a los consejos médicos y a la administración de transfor- ma en un dolor bien localizado, que
medicamentos antidepresivos y analgésicos. involucra una de las sienes, aunque cualquier parte
Por último, hay un grupo de pacientes con cefa- del cuero ca- belludo puede estar comprometida, lo
lea diaria y crónica, durante todo el día, todos los que depende de cual de las ramas de la carótida
días y durante meses o años; en ellos es muy evi- externa está in- flamada. En algunas ocasiones la
dente la asociación a una cefalea migrañosa. A su arteria de la sien afectada se hace prominente,
cuadro de cefalea embotante y constante, se añade sensible, poco depre- sible y pulsátil. Raramente se
una cefalea recurrente, severa, pulsátil, irradiada en ve una línea roja en la piel que la recubre.
forma de hemicránea con náuseas y vómitos. Estos Se debe pensar en este diagnóstico ante un pa-
ciente adulto mayor portador de una cefalea locali-
enfermos condicionan el quehacer de su vida y la de
zada que empeora. La sospecha se incrementa ante
sus familiares alrededor de “su dolor de cabeza”,
la aparición de otros síntomas o signos que
aunque ellos no parecen tener un distress físico. Se
sugieran una enfermedad generalizada, tales como:
sabe que su cefalea es empeorada por todo y no es
ayudada por nada, y se ha tornado resistente o pre- • Fiebre con sudoración.
sentado efectos colaterales ante una gran variedad • Pérdida de peso.
de medicamentos. Por otro lado, son personas que • Artralgias.
con frecuencia se ofenden ante el planteamiento de • Dolor en hombros y espalda (polimialgia reu-
que su cefalea está relacionada con trastornos o dese- mática).
quilibrios psicológicos, pues están convencidos de • Eritrosedimentación acelerada.
que su dolencia responde a un proceso orgánico oculto. • Anemia moderada; leucocitosis.

Fisiopatología El diagnóstico se confirma mediante una biopsia


Es desconocida; posiblemente algunas cefaleas re- de la arteria afectada, que muestra una arteritis de
lacionadas con trabajos en locales cerrados y pro- células gigantes, caracterizada por una inflamación
longados asociados con fatiga son causadas, al menos granulomatosa de la íntima y parte interna de la
en parte, por dolor muscular cervical o espamo de media, con linfocitos y células epitelioides.
los músculos del cuero cabelludo. Otros casos, so- Hemorragia subaracnoidea
bre todo aquellos relacionados con estados depresi- Es un cuadro muy agudo e incapacitante, cuya
vos u otra forma de stress emocional, quizás no cefa- lea involucra toda la cabeza y el cuello, se
tengan un substrato orgánico, pero a la larga repre- irradia a la espalda y se acompaña de toma más o
sentan un dolor psíquico referido al soma. menos in- tensa de la conciencia. La cefalea
permanece duran-
346
te días, para luego disminuir progresivamente en in- Cefalea por hipotensión del líquido
tensidad hasta desaparecer (ver el capítulo “Enfer- cefalorraquídeo
medades cerebrovasculares”). Meningoencefalitis Se produce cuando el LCR disminuye por debajo
La cefalea es un síntoma de aparición temprana en del 10 % de su volumen total (150 ml aproximada-
el curso de la meningoencefalitis, y al igual que en mente) y desaparece al normalizarse la presión de
la hemorragia subaracnoidea, en ocasiones llega a éste. Se presenta de forma esporádica, es de locali-
ser muy intensa. Se acompaña de vómitos, signos zación frontal y menos frecuente suboccipital; su
de irritación meníngea y toma del sensorio de ma- intensidad es moderada y se acompaña de sudora-
yor o menor intensidad. ción, palidez, náuseas y vómitos. Se alivia con ma-
La instalación menos aguda de la cefalea y los niobras que aumentan la presión intracraneal, como
signos de infección, generalmente permiten diferen- la tos, el estornudo, la defecación, etc.
ciar una meningoencefalitis de una hemorragia suba- Es común ver esta cefalea secundaria a la pun-
racnoidea (ver capítulo “Infecciones del sistema ción lumbar, cuando no fueron tomadas las medidas
nervioso central”). profilácticas pertinentes o cuando se administran
soluciones endovenosas hipertónicas, pues el abuso
Hipertensión intracraneal de tales preparados aumenta la presión osmótica de
En sus inicios esta cefalea es moderada y gana pau- la sangre, cuyo exceso impide la formación del
latinamente en intensidad a través de un período que LCR. También ocurre secundariamente a pérdidas
oscila entre semanas y meses. Se ve agravada por de LCR por fracturas craneoespinales,
factores tales como la posición de la cabeza hacia estados toxinfecciosos, como la fiebre tifoidea o la
abajo, constipación, tos, etc., los cuales aumentan la uremia, estados de deshidratación, hipertensión
presión intracraneal. arterial sú-
La cefalea es constante en su localización y se- bita, hipoglicemia, etc.
gún el tiempo de evolución, la masa intracraneal que
crece es capaz de producir otros síntomas y signos Cefalea postraumática crónica
neurológicos (vértigos, dificultad en la ideación, Es un tipo de cefalea que tiene el antecedente obli-
cambios en la personalidad, desviación de la comi- gado de un traumatismo craneoencefálico y que
sura labial o anormalidad en los reflejos, etc.) (ver aparece tras un período de tiempo variable, que va
capítulo “Tumores intracraneales”). desde 2 meses hasta 2 años.
Muchas veces se produce por tracción o tironea-
Hipertensión arterial miento de las estructuras sensibles al dolor por una
A pesar de que los hipertensos pueden padecer una brida meníngea; otras, por mecanismos semejantes
cefalea migrañosa o de tipo tensional como cual- a los de la cefalea tensional o a la de origen
quier otra persona, en ocasiones es consecuencia de vascular. Cefalea epiléptica
la hipertensión arterial, y en este caso suele ser de
Predomina de manera fundamental en la infancia y
presentación matinal o de madrugada y despertar al
adolescencia, no muestra predilección por ningún
enfermo, disminuir después que este se levanta y
sexo y es de aparición irregular. Es una cefalea pa-
desaparecer a media mañana.
roxística, que se acompaña de cambios en el EEG
La cefalea tiene carácter generalizado o, por el de tipo epiléptico, que aumenta progresivamente de
contrario, está localizada a la región frontal u intensidad y llega a su clímax en poco tiempo; pue-
occipital; su instalación casi siempre es lenta y pro- de durar varias horas y terminar de forma brusca,
gresiva, aunque a veces es de tipo paroxístico y debe igual que comenzó.
hacernos valorar la posibilidad de un AVE hemorrá-
En ocasiones el dolor adopta la forma de hemi-
gico. Se hace menos frecuente cuando se logra dis-
cránea y se acompaña de náuseas y vómitos, por lo
minuir las cifras tensionales a límites lo más cercano
que es necesario en estos casos diferenciarlo de un
a lo normal.
ataque de jaqueca. Esta cefalea también se mani-
fiesta después de una crisis o estado de mal
epilép- tico.
347
Otras causas de cefalea cefalia, edema cerebral y algunas malformaciones
Los procesos antes mencionados son los de mayor vasculares arteriovenosas o aneurismáticas.
connotación como causas de cefalea, pero existen Tratamiento
otros tipos etiológicos que se mencionan a continua- La conducta que se debe seguir para aliviar una ce-
ción: falea es variable, ya que como se ha visto, las cau-
1. Cefalea de causa ocular. sas que la producen son múltiples. Así, la cefalea
2. Relacionada con alteraciones de las estructu- desaparece cuando se impone tratamiento específi-
co a una sinusitis, a un trastorno de refracción o a
ras nasales o auditivas.
un glaucoma, o cuando se resuelve un problema
3. De causa dentaria.
audi- tivo.
4. Relacionada con neuralgia de pares craneales.
Cuando se está frente a un conflicto de espacio
5. En el curso de una artritis temporomaxilar. consecutivo a un tumor cerebral, absceso o un he-
Diagnóstico y exámenes matoma subdural, el tratamiento será quirúrgico.
complementarios Si se trata de una meningoencefalitis bacteriana,
La clave para el diagnóstico de una cefalea está en la antibioticoterapia contra el germen causal se im-
los datos obtenidos con la historia clínica, ya que pone, y si en el cuadro clínico hubiera síntomas im-
portantes dependientes del edema cerebral, éste
ésta aporta elementos tales como su curso, duración,
debe ser tratado. El uso de analgésicos y de los
localización, factores que la exacerban o disminu-
AINE no está contraindicado.
yen, su intensidad, etc.
En el caso de una hemorragia subaracnoidea,
El examen físico es normal en la mayoría de los
ade- más del tratamiento específico de la
casos al comienzo del síndrome, pero suele propor- afección, es necesario utilizar analgésicos y sedantes
cionar información importante en los casos graves. en dosis ge- nerosas si el caso lo requiere. Se
utiliza el maleato de proclorperazine (Campazine),
Exámenes de laboratorio 10 mg EV lento, el cual ha demostrado gran
Los datos suministrados por la historia clínica orien- efectividad en el alivio de la cefalea; también se
tarán hacia cuales exámenes complementarios se de- emplea con buenos resul- tados la clorpromazina en
ben realizar. Se indicarán buscando alteraciones en dosis de 12,5 mg EV lento, que se puede repetir 2
los valores hematológicos, como poliglobulia, veces con intervalo de 20 min, sin sobrepasar como
serología positiva, urea y creatinina elevados, eri- dosis total 37,5 mg; no se debe olvidar que tanto
trosedimentación acelerada, trastornos en el LCR la proclorperazine como la clorpromazina son
(presión, componentes), y todos aquellos que se con- derivados de las fenotiazinas y tienen como
sideren necesarios según la sospecha etiológica. efectos colaterales somnolencia, distonía e
hipotensión arterial.
Exámenes imagenológicos Otro medicamento es la metoclopramida, sola o
Deben realizarse estudios radiológicos de cráneo en en combinación con la dihidroergotamina, en dosis
tres posiciones (anteroposterior, lateral y Towne), de 10 mg la primera y 1 mg la segunda, por vía EV
así como de la columna cervical, también en tres lenta.
posiciones (anteroposterior, lateral y oblicuas). En Si la cefalea fuera rebelde a los medicamentos
ambos estudios se buscarán alteraciones en la confi- antes mencionados, no se dudará en emplear los
guración del cráneo o de la columna, y la presencia nar- cóticos, ya sea el tartrato de butorfenol (Stadol), 2
mg por vía IM, o la combinación de meperidina, 50
de signos radiológicos de hipertensión intracraneal,
mg, y pamoato de hidroxyzine (Vistaril), 100 mg
lesión de la silla turca o lesiones destructivas óseas
por vía IM.
únicas o múltiples.
El ketoralaco de trometamina (Toradol), AINE
La TAC contrastada es un medio muy importante
de uso parenteral, ha demostrado ser eficaz en
para la identificación de lesiones que causan cefa- dosis de 60 mg por vía IM, igual que el
lea, como aquellas capaces de producir un conflicto antimigrañoso succinato de sumatriptán, que con 6
de espacio (tumores, hematomas, abscesos), hidro- mg por vía SC es capaz, en el 70 % de los casos,
de disminuir o desaparecer el dolor de cabeza.
348
En la cefalea secundaria a hipotensión del LCR, • Verapamilo, 240 a 600 mg/día.
lo mejor es la prevención utilizando para ello todas • Carbonato de litio, 600 a 1 200 mg/día.
las medidas indispensables, tales como el uso de • Prednisona, 15 a 60 mg/día.
trócar fino y hacer adoptar al paciente la posición
supina y sin almohadas, por lo menos 8 h después No se debe olvidar que los medicamentos antes
de la punción. Si llegara a producirse la cefalea, semencionados tienen efectos colaterales indeseables
mantendrá al enfermo en decúbito supino y se indi- que es necesario conocer; así, la metisergida es ca-
cará ASA, 0,5 g 4 veces al día. Puede utilizarse la paz de producir fibrosis retroperitoneal, pleuropul-
dipirona, o los esteroides, 15 a 20 mg por día. La monar o cardíaca cuando se usa de forma
reposición del LCR perdido mediante la adminis- prolongada, por lo cual hay que suspender su
tración de solución salina fisiológica intratecal, sólo
administración cada 6 meses. También debe
se realiza en casos excepcionales. suprimirse en caso de aparecer vasoconstricción
Si se trata de una arteritis temporal, el tratamien-
periférica, claudicación intermitente o angor
to con corticosteroides está indicado en dosis de 40
pectoris, una valvulopatía o al- guna enfermedad
a 60 mg diarios, con lo cual se logrará un efecto
del colágeno.
positivo en el curso de la enfermedad. Los AINE
En lo referente al verapamilo, hay que recordar
también han demostrado ser eficaces para mejorar
los síntomas, aunque a diferencia de los corticoides que cuando la dosis empleada sea mayor de 400
no lo son para reducir el riesgo potencial de la ce- mg/ día, deben indicarse ECG periódicos, a fin de
guera. deter- minar los efectos del medicamento en la
En la cefalea de tipo tensional, los dos medica- conduc- ción auriculoventricular o para detectar
mentos que mejores resultados han mostrado son la alguna otra afectación del músculo cardíaco.
amitriptilina y el doxepín (Sinequán), administra- La dosis inicial de esteroides se mantiene durante
dos 1 vez al día, preferiblemente antes de dormir, ya1 semana y posteriormente se va disminuyendo de
que ambos, como efectos colaterales, producen som- forma escalonada. Entre sus efectos colaterales in-
nolencia, además de sequedad en la boca, constipa- deseables están el insomnio, retención de líquido,
ción y aumento de peso. Las dosis oscilan entre 25 mala distribución de la grasa corporal, gastritis me-
y 75 mg diarios, vía oral. Además, se utilizan dicamentosa, sangramiento digestivo, cambios en
relajantes, calor local y fisioterapia encaminada a el carácter, etc.
fortalecer la musculatura cervical. También se debe conocer que las sales de litio
En cuanto a la cefalea agrupada o arracimada, se están contraindicadas cuando hay trastornos elec-
deben tener en cuenta 3 aspectos en el tratamiento: trolíticos o cuando es necesaria la restricción del
sodio o se impone el uso de una terapia diurética.
a) Medidas generales. En esta última situación la intoxicación por litio
b) Tratamiento preventivo de la crisis. apa- rece con facilidad debido al incremento de la
c) Tratamiento abortivo de la crisis. reab- sorción tubular del medicamento; se
producen entonces síntomas que van desde el
Medidas generales temblor hasta las convulsiones.
Están encaminadas a instruir al paciente acerca de Entre los síntomas colaterales indeseables de las
su enfermedad y a conocer el horario preferente de sales de litio están los dependientes del tubo diges-
los ataques, así como la importancia de suprimir la tivo, como son: náuseas, malestar abdominal y
ingestión de alcohol. diarreas. Estas alteraciones suelen desaparecer cuan-
do las dosis de administración del medicamento
Tratamiento preventivo de la crisis son espaciadas.
Existen 4 medicamentos que han demostrado efec-
tividad en la prevención del ataque de cefalea arra- Tratamiento abortivo de la crisis
cimada. Ellos son: Hay 3 medicamentos que han mostrado verdadera
efectividad para hacer abortar una crisis de cefalea
• Metisergida (Lysenil o Desenil) , en dosis de 4 agrupada. Ellos son:
a 12 mg/día.
a) Oxigenoterapia.
349
b) Derivados del ergot. La metisergida se iniciará con dosis de 2 mg/día
c) Succinato de sumatriptán. y se irá incrementando progresivamente hasta lle-
gar a 8 a 12 mg/día. Sus efectos indeseables y con-
El oxígeno debe ser administrado al 100 % me- traindicaciones ya fueron explicados.
diante una máscara, a 8 o 10 L / min por espacio de De los betabloqueadores existentes, el proprano-
unos 15 min, cuando se inicia el ataque. lol es el más usado, 80 a 160 mg/día, repartidos en
Los derivados del ergot (Ergofeína: tabletas con 3 o 4 tomas. Se emplea también en tabletas de
1 mg de ergotamina y 100 mg de cafeína, hasta 4 al libera- ción lenta, en una dosis única diaria. Los
día) se toman preferentemente por vía sublingual. efectos co- laterales indeseables son fatiga,
Entre sus efectos colaterales indeseables están las depresión, insomnio e impotencia sexual, y está
náuseas y el mal gusto en la boca, así como los ca- contraindicado en pacientes con bradicardia
lambres en los miembros inferiores. El medicamen- sinusal, bloqueo A-V, in- suficiencia cardíaca y
to está contraindicado en pacientes hipertensos o que enfermedad pulmonar obstruc- tiva. Otro
padezcan de una cardiopatía isquémica. La dihidroer- betabloqueador es el timolol, 10 mg 2 veces al
gotamina viene en ámpulas de 1 mg, IM o EV, que día, que pueden aumentarse semanalmente hasta 30
pueden repetirse en 1 h. No deben inyectarse más mg diarios.
de 6 mg en la semana. La amitriptilina se comienza con 1 tableta de 25
El sumatriptán, administrado en dosis de 6 mg mg antes de dormir y se incrementa la dosificación
por vía SC, es capaz de hacer abortar el ataque en de manera gradual hasta que aparezca sequedad de
menos de 15 min. Dentro de sus efectos colaterales la boca. Otros efectos indeseables del medicamento
indeseables se encuentra la sensación de calor, ti- son constipación y ganancia de peso. Está contrain-
rantez u hormigueo, generalmente localizados en la dicado en pacientes glaucomatosos, epilépticos,
parte anterosuperior del tórax, porción anterior del con arritmias cardíacas o con hipertrofia prostática.
cuello y cara. Al igual que la ergotamina, está con-
El verapamilo se utiliza comenzando con 240
traindicado en los enfermos hipertensos o portado-
mg al día que se aumentan hasta 480 mg diarios. Se
res de una cardiopatía isquémica.
to- lera bien y la constipación es su efecto adverso
En el caso de la cefalea migrañosa, el tratamiento
más común, aunque han sido descritos casos de
también se divide en preventivo y abortivo del ataque.
infertili- dad en hombres. Está contraindicado en
pacientes con bloqueos A-V y síndrome del seno
Tratamiento preventivo del ataque migrañoso enfermo, ya que enlentece la conducción
En éste se incluyen medidas higienodietéticas en-
auriculoventricular. Otras opciones son la
caminadas a disminuir o abolir la ingestión de ali-
cinarizina, 25 mg 3 veces al día, y la flunarizina:
mentos como queso, yogurt, chocolate, vino rojo,
10 mg diarios en una sola do- sis, ambas por vía
tomate, etc., los cuales son ricos en serotonina.
oral.
Tam- bién se evitará la ingestión de alcohol, ya que
causa vasodilatación, y por igual causa el uso y Los medicamentos antes mencionados se pueden
abuso de productos alimenticios que, como las combinar y es una buena elección el propranolol
carnes cura- das (bacon, jamón), contengan nitrato con la amitriptilina. Debe tomarse mucha
de sodio para ser preservados. Los productos con precaución cuando se combinen propranolol y
cafeína, tiramina y feniletil-amina (los dos últimos, metisergida, por la vasoconstricción periférica que
aditivos quími- cos para algunos alimentos) deben se produce, o pro- pranolol con verapamilo, por la
ingerirse poco, ya que al actuar sobre las fibras bradicardia que pro- vocan.
simpáticas liberan adrenalina y noradrenalina, lo que
causa inicialmente vasoconstricción seguida de un Tratamiento abortivo del ataque migrañoso
estado de vasodila- tación de rebote, el cual es Está encaminado a yugular la vasodilatación dolo-
responsable del surgi- miento de la cefalea. rosa de los vasos craneales.
Además, el tratamiento preventivo incluye el uso Entre los medicamentos utilizados está la asocia-
de medicamentos como la metisergida, los betablo- ción de acetaminofén y codeína, en dosis de 1
queadores, los antidepresivos y los anticálcicos. table- ta 3 veces al día (cada tableta contiene 325
mg de acetaminofén y 50 mg de butalmital). Otro
fármaco que ha mostrado utilidad es el Florinal,
combina-
350
ción de aspirina (325 mg), butalmital (50 mg) y ergotamina en forma de metanosulfonato de dihi-
cafeína (50 mg), en igual dosis que el anterior. Tam- droergotamina (ámpulas de 1 mg) para uso IM, SC
bién se emplea ergotamina (Ergofeína), que se ad- o EV.
ministra en dosis de 1 a 2 mg al comienzo de la Otro medicamento útil en el tratamiento abortivo
crisis, seguido de 2 mg al cabo de 1 h. No debe de una crisis migrañosa es el succinato de
sobrepa- sarse de 6 mg como dosis total para un solo sumatrip- tán, por vía oral en dosis de 100 mg, o
ataque. Entre sus efectos colaterales indeseables SC, 6 mg. El fármaco puede repetirse pasada 1 h y
están las náuseas, los vómitos, las mialgias y los reduce la in- tensidad o hace desaparecer el ataque
episodios de dolor anginoso (vasoconstricción migrañoso en el 70 % de los pacientes; no obstante,
importante).
la duración de su acción medicamentosa es corta y
No siempre se logran los resultados deseados con
en ocasiones el dolor reaparece pasadas 8 a 12 h.
el uso de medicamentos por vía oral, a causa de que
En ese caso se repite la inyección o se administra
durante un ataque de migraña no son raras la atonía,
dilatación gástrica y cierre del esfínter pilórico, con ergotamina, que como se sabe, tiene un efecto
disminución en la absorción; esto se debe probable- constrictor prolon- gado.
mente a una hiperactividad del sistema simpático se- El sumatriptán no debe ser usado antes de que
cundaria al dolor. En ese caso se contrarresta esta transcurran 24 h de la última dosis de ergotamina y
situación añadiendo al tratamiento clorhidrato de me- ésta no debe ser empleada hasta pasadas 6 h de la
toclopramida, en dosis de 10 mg administrados 15 min última dosis de sumatriptán.
antes de los otros medicamentos. Esta droga, ade- Otros medicamentos de los agonistas recepto-
más de antiemético y antinauseoso, también tiene res 5HT 1B/1D, que tienen las mismas
efectos hiperquinéticos sobre el estómago. indicaciones y contraindicaciones que el
Si la vía oral no es factible, se usan los medica- sumatriptán (agonista
mentos en forma de supositorios por vía rectal. El 5HT1), son:
de indometacina, además de su efecto analgésico y
antinflamatorio, posee también acción constrictora Naratriptán: 1 a 2,5 mg con líquidos por vía
sobre las arterias intra y extracraneales. La dosis es oral, cada 4 h, con un máximo de 5 mg en 24
de 1 supositorio de 30 mg cada 30 min, sin sobrepa- h. No usarlo más de 4 veces al mes.
sar un máximo de 4. Otro que se utiliza es el de er-
gotamina, que contiene 2 mg del medicamento; debe Rizatriptán: 5 a 10 mg al inicio; puede repetirse
aplicarse medio supositorio cada media hora, sin a las 2 h, hasta un máximo de 30 mg en 24 h. Si
sobrepasar de 2 como dosis total. el enfermo utiliza un betabloqueador, hay que
La ergotamina es un fármaco de acción prolonga- redu- cir la dosis a la mitad.
da, cuyo efecto vasoconstrictor suele durar hasta 3
días, por lo que no debe usarse con una frecuencia Zolmitriptán: 1,25 a 2,5 mg, que de ser necesario
mayor de 1 vez por semana, ya que si se sobrepasa se repite a las 2 h, hasta un máximo de 10 mg en
este límite, puede producirse un cuadro cefalálgico 24 h.
indistinguible de la cefalea migrañosa, el cual es con-
secuencia de un fenómeno de vasodilatación por re- Ninguno de estos medicamentos se recomienda
bote. emplearlos en los niños y están contraindicados en
La vía parenteral también se emplea en el trata- la cardiopatía isquémica, hipertensión arterial,
miento de la migraña y por ella se administra la arrit- mias y en la migraña hemipléjica.
351
37
TRASTORNOS DEL MOVIMIENTO
Concepto y clasificación 1. Parkinsonismo idiopático o enfermedad de
Par- kinson.
de los trastornos del movimiento
2. Parkinsonismo secundario o sintomático.
En los trastornos del movimiento se incluyen un a) Inducido por tóxicos.
grupo de afecciones en las que predominan las alte- b) Inducido por fármacos.
raciones en la forma y velocidad de los movimientos c) Posencefalítico y posvacunal.
corporales. Esto puede ser la única manifestación
d) Postraumático.
clínica de una enfermedad, o formar parte de las
e) Vascular.
manifestaciones neurológicas de otras más complejas.
f) Hidrocefalia.
Clínicamente se encuentran dos grandes grupos de
g) Lesiones ocupantes de espacio (tumores,
trastornos del movimiento: los caracterizados por
pobreza o lentitud de éste (acinesia), que suelen abs- cesos, hematomas subdurales).
acompañarse de aumento del tono muscular o rigi- h) Trastornos metabólicos (enfermedad de
dez (síndrome rígido-acinético), y los que se carac- Wil- son, enfermedad de las paratiroides,
terizan por la presencia de movimientos anormales etc.).
involuntarios (discinesias). En este último se encuen- i) Enfermedad causada por priones.
tran: temblor, corea, balismo, atetosis, distonía, 3. Parkinsonismo asociado a enfermedades neu-
mioclonías, tics, esterotipias o acatisia, que se cla- rodegenerativas.
sifican en dependencia de diversos factores, como a) Parálisis supranuclear progresiva.
la distribución, velocidad, amplitud, estereotipia, b) Atrofia multisistémica.
ritmicidad, capacidad de supresión por parte del c) Degeneración corticobasal gangliónica.
paciente, relación con la postura, sueño o actividad, d) Enfermedad difusa de los cuerpos de
factores precipitantes o que la alivian, y otros sínto- Lewy. e) Complejo ELA-Parkinson-
mas asociados. demencia de la
isla de Guam.
Síndromes parkinsonianos o rígido- f) Enfermedad de Alzheimer con parkinso-
acinéticos nismo.
El síndrome parkinsoniano se caracteriza desde el g) Enfermedad de Huntington (variante rígida
punto de vista clínico por la asociación de temblor, de Westphal).
rigidez, acinesia-bradicinesia y pérdida de los re- h) Enfermedad de Hallervorden-Spatz.
flejos posturales; el modelo más frecuente y principal i) Enfermedad de Machado-Joseph.
de éstos es la enfermedad de Parkinson (EP) idio- j) Atrofias palidales primarias.
pática, pero existen otras muchas causas de parkin- k) Parkinsonismo con amiotrofia.
sonismo. l) Distonía-parkinsonismo.
m) Parkinsonismo con demencia de herencia
Clasificación autosómica dominante asociada a degene-
Clasificación etiológica de los síndromes parkinso- ración palidonígrica.
nianos (modificada de Stern & Koller y Weiner & 4. Otras.
Lang): a) Síndrome hemiparkinsonismo-hemiatrofia.
b) Calcinosis estriopálido-dentada bilateral.
c) Parkinsonismo psicógeno.

352
Las anomalías bioquímicas encontradas en los
ENFERMEDAD diferentes sistemas son:
DE PARKINSON Sistema colinérgico. La actividad de la enzima
que regula la síntesis de acetilcolina (colino- acetil-
transferasa: CAT) se conserva en el striatum de los
Fisiopatología pacientes con EP, y se ha demostrado un aumento
En 1817, James Parkinson describió la enfermedad de la actividad colinérgica como reflejo de la pérdi-
que luego llevaría su nombre, y a pesar de los ade- da del tono inhibidor dopaminérgico.
lantos en el conocimiento de su fisiopatología en los Sistema noradrenérgico. Se encuentra degenera-
ción del locus ceruleus, aunque menos que en la
últimos años, su etiología sigue siendo un enigma.
sustancia nigra, reducción de la concentración de
El término enfermedad de Parkinson se utiliza para
adrenalina y noradrenalina, de sus metabolitos, de
referirse a enfermos con parkinsonismo en cuya ana-
la enzima responsable de su síntesis y de los recep-
tomía patológica aparece despigmentación y pérdi-
tores adrenérgicos alfa-2; los receptores beta-2 se
da neuronal, con presencia de cuerpos de Lewy conservan y es posible que esto justifique en parte
(cuerpos hialinos de inclusión en las células dege- la depresión, alteración de la atención y deterioro
neradas de la sustancia nigra). Esta definición tiene mental.
un carácter clinicopatológico, pero carece de opera- Sistema serotoninérgico. La información, debido
tividad en la actividad clínica habitual. a la creciente complejidad del sistema, es escasa y
En 1960, Ehringer y Hornykiewicz, en Viena, parcial, aunque se han encontrado reducciones en
comprobaron en necropsias de pacientes parkinso- los niveles de serotonina y su principal metaboli-
nianos una degeneración celular en la sustancia nigra to (5-hidroxindolacético) en áreas tales como la
(parte compacta) y en el striatum, y pérdida del pig- cor- teza, hipotálamo y ganglios basales.
mento melánico en esas zonas con una severa defi- La causa que induce a la muerte neuronal es des-
ciencia de dopamina. conocida; estudios en pacientes homocigotos mues-
Existe un tenor de aminas distribuidas fisiológi- tran un papel genético limitado, aunque hay casos
camente en el SNC, y la degeneración de la sustan- en los que se ha podido comprobar una trasmisión
cia nigra trae como consecuencia una reducción a autosómica dominante; se han descrito, por otro
nivel del striatum de la concentración de dopamina, lado, alteraciones que sugieren la existencia de una
así como de la actividad de sus enzimas de síntesis alte- ración del genoma mitocondrial y hallazgos
(dopa descarboxilasa, tirosín hidroxilasa) y de los en ani- males de experimentación han llevado a
marcadores específicos de los terminales presináp-
plantear la hipótesis de que determinadas toxinas
ticos dopaminérgicos. Normalmente existe un equi-
ambientales o de producción endógena, podrían ser
librio entre el sistema facilitador colinérgico, cuyo
la causa de la enfermedad; otros plantean la
trasmisor es la acetilcolina, y el sistema inhibidor
relación con el fe- nómeno de hiperoxidación,
dopaminérgico, cuyo trasmisor es la dopamina. En
aunque no está claro si es causa o consecuencia de
la EP, al reducirse la concentración de la dopamina,
se produce una disminución de su efecto inhibidor; la muerte neuronal. Cuadro clínico
esto sería la causa de algunas de las características La enfermedad tiene un comienzo insidioso y una
sintomatológicas del parkinsonismo. Se reconocen progresión lenta; la edad media de inicio es entre
diversos tipos de receptores dopaminérgicos, D1 a los 40 y 70 años, la fatigabilidad y depresión mu-
D5; los receptores D1 y D2 se encuentran en el chas veces preceden a los síntomas motores y el
striatum y su estado depende del estadio de la enfer- tem- blor es el síntoma inicial más frecuente; otras
medad y de la administración de L-dopa o un anta- veces los pacientes refieren dificultad para realizar
gonista dopaminérgico; el resto de los receptores, tareas finas habituales, lo que describen como
desde D3 hasta D5 están mayoritariamente en la por- “incoordi- nación”, y les resulta trabajoso
ción extraestriatal, por lo que parece lógico pensar abrocharse los boto- nes o atarse los zapatos; el
que no desempeñan un papel clave en el control comienzo de los síntomas suele ser asimétrico, y
motor extrapiramidal. esto es tan característico que ha sido propuesto
como de mucha importancia.
353
El temblor es de reposo, a 4 o 6 Hz, y ocurre en
el 70 % de los casos; es fundamentalmente distal y
se localiza sobre todo en los brazos; con menor fre-
cuencia afecta los labios, mandíbula, lengua, pierna
y rara vez la cabeza; desaparece durante unos se-
gundos con el movimiento para reaparecer cuando
el miembro vuelve al reposo. En los dedos de las
manos toma un aspecto clásico, como en “cuenta
moneda”; aumenta con las emociones y desaparece
con el sueño, y por lo general cuando la enfermedad
avanza. Este temblor se debe a una contracción
alternante de músculos agonistas y antagonistas.
La rigidez es la resistencia al desplazamiento pa-
sivo de las articulaciones, se caracteriza por ser uni-
forme, y es más intensa y comienza en la musculatura
axial y proximal (cuello, hombros y caderas); final-
mente se extiende a todos los músculos del cuerpo,
es más fuerte en los músculos flexores que en los
extensores, y contribuye a la típica postura de flexión
(Figs. 37.1 a y 37.1 b). Se explora realizando el des-
plazamiento lento de la articulación, que permite
percibir el “fenómeno de la rueda dentada” o signo
de Negro, que se puede observar incluso antes de
(a)
que aparezca el temblor. En algunas series la repor-
tan en más del 90 % de los casos.
La acinesia se manifiesta de diferente manera en
dependencia de la musculatura o zona del cuerpo
afectada.
a) En la cabeza sus manifestaciones son: facies
hipomímica (cuajada, careta), disminución del
parpadeo, que se encuentra entre 5 y 10/min
(normal de 15 a 20/min), voz monótona, de bajo
volumen, la dicción más lenta al final de la fra-
se, sialorrea (se ha pensado en una producción
aumentada de saliva, pero el verdadero proble-
ma es la imposibilidad de tragar la cantidad
normal de ésta), dificultad para mover los ojos
(se mueven a saltos) y en estadios avanzados,
disfagia.
b) En los brazos se manifiesta por la presencia de
micrografía, pérdida de la destreza manual y
del braceo al andar.
c) En las piernas y tronco, por marcha a pequeños
pasos, dificultad para levantarse del asiento y
darse la vuelta en la cama.
(b)
La inestabilidad postural es el signo más incapa- Fig. 37.1 (a y b). Actitud típica del paciente con una enferme -
citante para la vida del paciente, el de peor respues- dad de Parkinson. Nótese la facies inexpresiva característica
de la enfermedad.
354
ta al tratamiento y el último en aparecer; es multi- tantes para planificar la cirugía, así como para el
factorial, se relaciona con la alteración en los refle- seguimiento evolutivo después de ésta.
jos de enderezamiento, acinesia y rigidez; se explora Diagnóstico
con la prueba del “empujón”, en la que el enfermo
se mantiene de pie, el explorador se coloca detrás Diagnóstico positivo
del sujeto, le coge por los hombros y lo impulsa El diagnóstico de la EP sigue siendo clínico, lo que
brus- camente hacia atrás; cuando hay alteración, el provoca cierta incertidumbre; exploraciones como
en- fermo dará más de dos pasos hacia atrás antes la tomografía por emisión de positrones (PET) y la
de recuperar su estabilidad, y los más afectados tomografía computadorizada por emisión de fotón
caerán al suelo, sin realizar movimiento único (SPECT), sólo se usan para la investigación,
compensatorio con los brazos, a menos que el dada su escasa fiabilidad y alto costo. Así,
explorador lo impida. solamen- te 65 o 75 % de los casos
La marcha a pequeños pasos aparece en estadios diagnosticados en vida cumplen criterios
avanzados de la enfermedad, por lo que su surgi- anatomopatológicos de EP; el resto corresponde a
miento aislado al inicio hace improbable el diagnós- otras enfermedades degenerativas con compromiso
tico de EP. Primeramente hay dificultad para andar del haz nigroestriado.
deprisa; después de establecida la dificultad en la Se considera que un paciente padece EP si cum-
marcha, la hay en iniciarla; los pies pueden marcar ple los criterios siguientes:
el paso pero sin desplazamiento; aparece la “festi- 1. Temblor, rigidez, bradicinesia (por lo menos
nación”, que consiste en andar a pasos cortos y rápi- dos de los tres signos cardinales), como míni-
dos, de forma incontrolada. mo durante 1 año (no se considera la inestabi-
En la EP aparecen otras manifestaciones no mo- lidad postural, ya que se asocia con frecuencia
toras, como pensamiento lento aunque con respues- a parkinsonismos secundarios).
ta correcta (bradifrenia); depresión, que está presente 2. Respuesta al tratamiento con L-dopa (dosis de
en el 40 % de ellos; ansiedad; disminución del por- al menos 1 000 mg/día durante 1 mes).
centaje de sueño con frecuente despertar, y demen- 3. Ausencia de signos denominados “atípicos”
cia de tipo subcortical que aparece en etapa tardía para el dagnóstico (piramidalismo, parálisis
en un 30 % de los casos. supranuclear de la mirada, signos cerebelosos
No hay alteración de los nervios periféricos, pero y de la motoneurona, demencia precoz, etc.).
se quejan de dolor, entumecimiento y hormigueos.
Hay estreñimiento, que es severo y de difícil tra- Diagnóstico diferencial
Los parkinsonismos distintos a la EP no son infre-
tamiento; también son comunes las alteraciones uri-
cuentes, pero la carencia de marcadores biológicos,
narias y sexuales, generalmente de grado leve, por
la presencia de cursos atípicos de la enfermedad y
lo que la severidad de éstas al comienzo de la enfer- la ausencia de algunos de los signos cardinales
medad hace improbable el diagnóstico. Además, son aspectos que causan mayor dificultad
aparece pérdida de peso, disminución de la masa diagnóstica. La parálisis supranuclear progresiva se
ósea, dermatitis seborreica con enrojecimiento de la distingue de la EP por la aparición precoz de
cara y descamación de la piel. inestabilidad y dificultad para la marcha, una mala
Las técnicas de neuroimagen principales para el respuesta al uso de L-dopa, ausencia de temblor, y
estudio de estos pacientes son la TAC y la RMN. La las características alteraciones oculares pueden ser
RMN ha supuesto un claro avance sobre la TAC; de tardías o no apare-
todas formas los hallazgos más comunes (disminu- cer nunca.
ción de la anchura de la pars compacta, contenido La atrofia multisistema se diferencia de la EP
de la sustancia nigra hipointenso, y otros) son ines- por una aparición precoz de trastornos autonómicos
pecíficos. Es importante señalar el papel cada vez se- veros, alteraciones de la marcha y signos
cerebelosos. Se debe pensar en la enfermedad de
más relevante de la espectroscopia por resonancia
los cuerpos de Lewy difusos, cuando hay signos
magnética (ERM), aunque aún sus resultados son
precoces de demencia, aparición de alucinaciones
limitados. Las técnicas de neuroimagen son impor- visuales en pacientes no tratados, fluctuaciones
cognitivas y
355
ausencia de temblor con predominio de la bradici- • Inhibidores del catabolismo de la dopamina.
nesia. De todas formas, el único diagnóstico de cer- • Inhibidores de la MAO-B ( monoaminoxi-
teza en vida es la biopsia cerebral. dasa-B)
Muchos autores consideran al parkinsonismo • Selegilina.
vascular equivalente al “parkinsonismo de la mitad • Lazabemida.
inferior del cuerpo”; aquí no hay alteración de los • Inhibidores de la COMT (catecol-o-metil
miembros superiores y presentan marcha a peque- transferasa)
ños pasos, titubeo y una respuesta mala (o no res- • Tolcapone.
puesta) a la levodopa; además, en la RMN aparecen • Entacapone.
alteraciones típicas en la sustancia blanca. • Nitecapone.
Evolución y pronóstico b. Agonistas dopaminérgicos.
La EP tiene un curso progresivo, que no es igual de • Bromocriptina.
un enfermo a otro y que ha variado con el uso de la • Pergolide.
levodopa. En la época previa a la levodopa, Hoehn • Lisuride.
y Yahr establecieron 5 estadios evolutivos que aún • Ropinirol.
siguen vigentes. En la actualidad, la enfermedad • Otros.
aumentó la duración media entre 3 y 5 años, la mor- c. Anticolinérgicos (Trihexifenidil, biperideno,
talidad disminuyó comparado con la era pre- otros).
levodopa, y además, es grande la mejoría en la d. Amantadina.
calidad de vida de estos enfermos. e. Otras medidas terapéuticas (“vacaciones” de
levodopa, fisioterapia y rehabilitación).
ESTADIOS EVOLUTIVOS DE ACUERDO
CON HOEHN Y YAHR
Levodopa
Estadio 1. Síntomas unilaterales. Los preparados de levodopa siguen siendo en la ac-
Estadio 2. Síntomas bilaterales, generalmente asimétricos, tualidad los medicamentos más efectivos en el tra-
sin alteraciones del equilibrio. tamiento de la EP; la aparición de efectos
Estadio 3. Incluyen alteraciones del equilibrio-inestabili-
secundarios
dad postural, aunque el paciente es aún inde-
pendiente para sus tareas cotidianas. (náuseas, vómitos, arritmias, hipotensión, etc.), cons-
Estadio 4. El enfermo requiere ayuda para sus actividades tituyó una limitante inicial en su uso, pero esto se
de la vida (comer, vestir, asearse, caminar), aun- fue solventado con la síntesis de inhibidores extra-
que aún es capaz de mantenerse en pie con ayuda. cerebrales de la dopa-descarboxilasa: la
Estadio 5. El paciente es dependiente para todo de los de-
bencerazida y la carbidopa. La levodopa, en la
más, y está confinado a una silla de ruedas o a
la cama. actualidad, siem- pre se utiliza unida a un
inhibidor de la dopa- descarboxilasa para
disminuir los efectos adversos y aumentar su
Tratamiento efectividad.
La terapéutica inicial de la EP debe tener en cuenta Los preparados disponibles son los siguientes:
los objetivos siguientes: mejorar los síntomas, re- Sinemet plus (25/100) = 25 mg de carbidopa
trasar la progresión de la enfermedad y prevenir la y 100 mg de levodopa.
aparición de complicaciones a corto y largo plazo. Sinemet (25/250) = 25 mg de carbidopa y 250
Tratamiento médico mg de levodopa.
a. Levodopa. Madopar (50/200) = 50 mg de bencerazida y 200
Medidas encaminadas a mejorar la biodisponibi- mg de levodopa.
lidad de la levodopa:
• Dieta (redistribución proteica). Las preparaciones de liberación retardada tienen
• Mejorar la evacuación gástrica y la absorción las mismas combinaciones:
intestinal. Sinemet plus retard (25/100); Sinemet retard (50/
200) y levodopa (tabletas 500 mg).
Al inicio del tratamiento, las combinaciones con
proporción de 4:1 pueden ofrecer mejor tolerancia
356
y mayor facilidad en la titulación de la dosis. El tra- que se trata reduciendo el intervalo entre las tomas,
tamiento se inicia con dosis bajas y se aumentan gra- pero manteniendo la dosis total de levodopa.
dualmente de acuerdo con las necesidades del Otra fluctuación molesta para el paciente la
paciente (la absorción del medicamento se dificulta consti- tuyen las disquinesias, movimientos
con la presencia de proteínas en la comida). Tanto coreicos o dis- tónicos que afectan las
las preparaciones estándar como las de liberación extremidades, la cara y el tronco. Estas
retardada, son apropiadas para comenzar. La mayoría disquinesias de dosis “pico” ocurren 1,5 a 2 h
de los enfermos son controlados con dosis entre 300 después de cada toma y se tratan disminuyen- do la
y 750 mg al día de levodopa, repartidas en 2 tomas
dosis de levodopa y usando agonistas dopami-
para los preparados de liberación retardada, y 3 para
nérgicos para mantener un adecuado control de la
los estándar. Las tabletas de liberación retardada no
deben romperse porque esto altera sus propiedades, enfermedad.
por lo que el aumento de dosis en esta presentación Problemático y difícil de controlar es el efecto
debe realizarse mediante incrementos de 1 tableta on-off, el cual se caracteriza por oscilaciones súbi-
entera. La levodopa tiene un efecto acumulativo res- tas impredecibles y dramáticas de tipo motor, que
ponsable de la respuesta de larga duración e incluso se acompañan de episodios de inmovilidad total
de la persistencia del efecto varios días después que y a veces caídas al suelo. Estas fluctuaciones son
el tratamiento sea descontinuado (la vida media de difíci- les de tratar, pero pueden disminuir con la
la levodopa es corta). adición de un agonista dopaminérgico o a veces
Conviene recordar que la dosis mínima es la me- adminis- trando Sinemet en forma más frecuente, o
jor y que se debe hacer un aumento progresivo de ensayan- do preparados de liberación retardada.
ésta para evitar los efectos secundarios. La hipoten- También se ha probado dar un breve período de
sión ortostática sintomática ocurre de forma infre- descanso o “vacaciones” de la levodopa por algunos
cuente en las fases precoces de la enfermedad y su días, para que desaparezcan así el fenómeno on-off,
presencia puede sugerir que se trate de una atrofia la pérdida de eficacia de la droga y las disquinesias,
multisistémica. Los trastornos psiquiátricos comien- y luego se va reiniciando otra vez en forma lenta.
zan, en general, por una alteración de los patrones Sin embargo, esto no es aconsejable porque
del sueño asociada a pesadillas y terrores noctur-
implica graves riesgos de tromboflebitis,
nos, seguida de alucinaciones recurrentes de tipo
embolismo pulmo- nar, infecciones respiratorias,
generalmente visual, hasta llegar en ocasiones a gra-
hipertermia, cuadros confusionales e incluso
ves estados de psicosis paranoide, pero éstos son in-
síndrome neuroléptico ma- ligno. Sólo debe
frecuentes al comienzo del tratamiento y se logran
controlar con la disminución de la dosis. En algunos realizarse en casos muy seleccio- nados con mala
pacientes esta complicación constituye un verdade- respuesta a otras terapéuticas.
ro efecto dosis-limitante. La mejoría de la evacuación gástrica —ejemplo,
De manera aproximada el 90 % de los enfermos con cisapride— disminuye el metabolismo de la
diagnosticados responden espectacularmente al tra- levodopa en el estómago por la dopa-descarboxila-
tamiento con levodopa y la mitad de ellos desarro- sa presente en la mucosa gástrica, lo que aumenta
llan complicaciones entre los 3 y 7 años de iniciado la biodisponibilidad del medicamento y mejora las
aquél. Los problemas que más importacia tienen son fluc- tuaciones. Los fármacos deben de ingerirse
la aparición de fluctuaciones en la movilidad a lo fuera de las comidas, sobre todo si tienen
largo del día en relación con la dosis de levodopa, proteínas, porque los aminoácidos dificultan su
de movimientos anormales y complicaciones psi- absorción.
quiátricas en menor porcentaje; una proporción aún
menor sufre una disminución progresiva de la efica- Inhibidores del catabolismo de la levodopa o
cia y respuesta terapéutica a la levodopa. dopa- mina
Fluctuaciones motoras de la terapia crónica con La MAO-B es una de las dos vías del catabolismo
levodopa. La más común de estas fluctuaciones es de la dopamina. Al disminuir el catabolismo y la
“el deterioro o terminación de dosis” (wearing off), recaptación de dopamina, se incrementan los nive-
les de ésta en el espacio sináptico. Cuando se admi-
nistra, es necesario reducir la cantidad de levodopa
para que así no aumenten o aparezcan las disquine-
sias. La dosis estándar es de 5mg 2 veces al día,
por
357
la mañana y medio día, ya que la última toma, ad- levodopa. Los fármacos de uso más comunes son
ministrada más tarde, suele causar insomnio. trihexifenidil y biperidén.
La COMT constituye la segunda vía metabólica
de la dopamina, y con el uso de inhibidores de esta Amantadina
enzima se inhibe la degradación de la dopamina y Fármaco útil en el tratamiento de la EP y bien tole-
aumenta su biodisponibilidad. Estos preparados rado, pero menos eficaz que la levodopa; puede
(tolcapone, entacapone y nitecapone), cuyos resul- usar- se como monoterapia al inicio, cuando los
tados son alentadores, disminuyen el tiempo off de síntomas son leves, pero su eficacia disminuye
las fluctuaciones motoras. después de algunos meses de tratamiento. El
mecanismo de pro- ducción que se ha sugerido es
Agonistas dopaminérgicos que se trata de un antagonista de los receptores de
Bromocriptina. Alcaloide ergótico productor de es- N-metil-D-aspartato
timulación prolongada de los receptores dopaminér- (NMDA). En general se administran 200 mg
gicos, tiene acción sobre los receptores D2 y es diarios divididos en 2 o 3 tomas.
agonista de forma parcial sobre los D1. La dosis
inicial es de 1,25 mg en la noche, la que se aumen- Otras medidas terapeúticas
ta de 1,25 mg hasta 7,5 mg diarios; según la res- Una de ellas fue mencionada anteriormente como
puesta, se incrementa gradualmente cada 15 o 20 las “vacaciones” de levodopa, con los peligros que
ello implica.
días hasta llegar a 30 mg diarios.
Importante en estos enfermos es el tratamiento
Pergolide. Agonista con afinidad por los recepto-
de la depresión, sea de causa reactiva o endógena.
res D1, D2 y D3. Tiene mayor capacidad de inducir
Se tratan con antidepresivos (imipramina,
trastornos psiquiátricos como efectos adversos por-
amitriptili- na, etc.).
que también tiene afinidad por receptores D3. Se
Muchos pacientes desarrollan demencia, que se
comienza con 0,05 mg que se aumentan lentamente asocia a alucinaciones visuales, insomnio, excita-
hasta 1 a 3 mg diarios en 3 tomas. ción, etc., que pueden ser controlados con la
Lisuride. Estimula de manera fundamental los clozapina, 12,5 mg hasta 125 mg diarios, con la
receptores dopaminérgicos postsinápticos D2, y los ven- taja de no aumentar la rigidez y el temblor. Es
efectos secundarios son comunes a los encontrados acon- sejable la fisioterapia y, además,
en el resto de los ergóticos. Se presenta en tabletas favorecer el contacto médico-paciente-familiares
de 0,2 y 1 mg, y se comienza con 0,1 mg 2 veces al para mejor co- nocimiento de esta afección crónica
día, que se aumentan lentamente hasta alcanzar 2 y así facilitar la vida a los enfermos.
a 4 mg/día en 4 tomas. En resumen, si la incapacidad es ligera, se co-
Ropinirol. Es un agonista dopaminérgico especí- mienza el tratamiento con monoterapia (agonista
fico de estructura no ergolínica para los receptores dopaminérgico o amantadina). Si la incapacidad es
D2 y D3. mayor o se quiere encontrar una respuesta más
rápi- da, se inicia con levodopa (Madopar o
Anticolinérgicos Sinemet); la asociación de un agonista y levodopa
El mecanismo de acción parece relacionado con el resulta eficaz. Otra forma de comenzar, es usando
bloqueo muscarínico de las neuronas colinérgicas selegilina, una opción razonable atendiendo a su
del cuerpo estriado y son más eficaces en la mejoría efecto neuropro- tector.
del temblor y la rigidez. Los efectos colaterales son El tratamiento con anticolinérgicos queda reser-
sequedad bucal, taquicardia, retención urinaria, vi- vado para pacientes jóvenes en los cuales el sínto-
sión borrosa, agravamiento del glaucoma de ángulo ma dominante sea el temblor. Los enfermos suelen
cerrado, estreñimiento, sedación, pérdida de la me- requerir medidas terapéuticas adicionales para pa-
moria, confusión y psicosis. La dosis máxima es liar diversas complicaciones que se hallan en rela-
de 15 mg diarios, pero debe iniciarse con pequeñas ción más o menos directa con la propia enfermedad
o con los fármacos utilizados; entre éstas se inclu-
cantidades y aumentarlas gradualmente; la efectivi-
yen los trastornos autonómicos, el dolor, otros sín-
dad de estos medicamentos no es superior a la de la
tomas sensitivos y alteraciones del sueño. Se
358
recuerda que el objetivo es devolver la capacidad riencias muy positivas con la subtalamotomía,
funcional al enfermo y, por lo tanto, el tratamiento en esta fecha sólo se contempla la posibilidad
debe ser individualizado y adaptado a las necesida- de realizar estimulación crónica del NST.
des de éste. El propósito no es abolir todos los sínto-
mas, porque puede que no sea posible sin tener que
utilizar cantidades elevadas de la medicación que
provoquen complicaciones. De ahí que otro princi-
MOVIMIENTOS
pio importante sea el de utilizar las dosis más bajas
posibles.
ANORMALES
Tratamiento quirúrgico
INVOLUNTARIO
El avance científico ha hecho posible un mejor co- S
nocimiento de la fisiopatología de las estructuras
implicadas en la enfermedad, y la aparición de me- (DISCINESIAS)
jores técnicas de neurofisiología y de neuroimagen
ha llevado a la búsqueda de nuevas alternativas de Temblor
tratamiento. Además, existe la necesidad urgente de Es el movimiento rítmico involuntario y oscilatorio
resolver las complicaciones que aparecen por el uso de una zona corporal que se produce por las con-
de levodopa de forma crónica. Los distintos proce- tracciones rítmicas de un músculo agonista y otro
dimientos quirúrgicos son: talamotomía, palidoto- antagonista, lo que ocurre de forma simultánea o
mía, estimulación cerebral talámica, estimulación alternante. Se clasifican en fisiológicos y patológi-
cerebral palidal y estimulación cerebral subtalámica. cos, y se distinguen una serie de variedades de
Las indicaciones generales son: acuer- do con sus circunstancias de aparición y con
1. Refractariedad al tratamiento médico. respecto a la actividad neuromuscular:
2. Calidad de vida afectada, y se prevé una nota- 1. Temblor de reposo.
ble mejoría sintomática con la cirugía. 2. Temblor postural.
3. Temblor intencional o de movimiento.
Se deben excluir:
1. Pacientes con trastornos psiquiátricos que im- El temblor fisiológico habitualmente es
pidan su cooperación. impercep- tible, está presente en todas las
2. Parkinsonismo diferente a la EP. personas, es más evidente en las actividades que
3. Problemas generales graves (HTA severa, en- requieren precisión, y tiene una frecuencia entre 8
fermedades graves o inestables). y 13 Hz, aunque esta suele disminuir con el
aumento de la edad.
Las indicaciones específicas y dianas quirúrgicas
El temblor de reposo ya fue descrito en el
son:
epígra- fe anterior.
1. Enfermos en los que predomine el temblor in-
El temblor intencional es el llamado temblor de
capacitante y rebelde a los fármacos, y que sea
la patología cerebelosa (lesiones del núcleo
síntoma fundamental; puede considerarse al
dentado y sus conexiones), desaparece con el
tálamo como diana (núcleo ventral intermedio).
reposo y au- menta su amplitud a medida que
2. Enfermos en los que predominen las complica-
finaliza el acto motor voluntario dirigido hacia
ciones motoras: discinesias desencadenadas por
un objeto; su fre- cuencia es de 4 a 6 Hz.
dosis bajas de levodopa (50 y 100 mg), refrac-
El temblor postural ocurre cuando se mantiene
tarias a fármacos, con poca afectación de la
una determinada postura y se explora teniendo el
postura y marcha (afectación axial); está indi-
paciente los brazos extendidos.
cada la cirugía sobre el globo pálido medial.
3. El núcleo subtalámico (NST) se considera como
de elección en enfermos con complicaciones Balismo
motoras rebeldes a los fármacos y con marcada Se caracteriza por movimientos amplios, bruscos,
afectación axial. A pesar de que existen expe- coreiformes, como de lanzamiento de toda una ex-
tremidad, con predominio proximal. Puede afectar
a un hemicuerpo (hemibalismo), una extremidad
359
(monobalismo), las extremidades inferiores (para-
balismo) o las cuatros extremidades (bibalismo).
Síndromes coreicos
Suele relacionarse con lesiones del núcleo subtalá-
mico de origen vascular. Clasificación
1. Coreas hereditarias.
Atetosis • Enfermedad de Huntington.
Se trata de movimientos ondulantes o reptantes, de • Coreoacantocitosis.
ritmo algo lento, que predominan en las porciones • Corea hereditaria benigna.
proximal o distal de las extremidades, aunque tam- • Coreoatetosis paroxística familiar.
bién toman el tronco, cabeza, cara, lengua; suelen • Enfermedades metabólicas hereditarias.
aumentar si el paciente intenta realizar un movimien- 2. Coreas secundarias.
to voluntario (overflow) o hablar. Según la duración • Fármacos (neurolépticos, antiparkinsonianos,
serán breves (coreoatetosis) y sostenidos (distonía- anticonvulsivantes, etc.).
atetósica). • Tóxicos (alcohol, monóxido de carbono,
man- ganeso, etc.).
Distonía • Enfermedades metabólicas adquiridas (hipo-
glicemia, hiperglicemia no cetósica, hipo e
Se caracteriza por la presencia de movimientos hipernatremia, insuficiencia renal y hepáti-
involuntarios de torsión breves (movimiento distó-
ca, etc.).
nico) o relacionados con una contracción muscular
mantenida (postura distónica); aumenta con la an- • Enfermedades nutricionales (beriberi, pela-
siedad y la fatiga, y mejora con el sueño y el reposo; gra, deficit de vitamina B12 en el niño, enfer-
a veces disminuyen también con estímulos propio- medad de Wernicke, déficit de vitamina D).
ceptivos o táctiles, ejemplo: poner el dedo sobre el • Enfermedades endocrinológicas (hipertiroi-
párpado en el blefarospasmo. Se relaciona con le- dismo, hipo, seudohipo e hiperparatiroidis-
siones del putamen. mo, enfermedad de Addison).
• Embarazo.
Mioclonias • Infecciones y parasitosis del SNC (escarlati-
na, fiebre tifoidea, endocarditis bacteriana,
Se llama así a una sacudida o contracción rápida e encefalitis letárgica, sífilis, meningoencefa-
imprevisible de uno o más músculos, muy breve, de litis virales [varicela, sarampión, parotiditis,
amplitud variable, causada por contracciones simul- infuenza, ECHO, etc.], toxoplasmosis,
táneas de músculos agonistas y antagonistas que pro-
SIDA, tuberculosis, etc.).
ducen un movimiento o inhibición del tono muscular,
• Enfermedades autoinmunes (LED, artritis
y se originan en el SNC (cortical, subcortical y espi-
reumatoidea, síndrome antifosfolípido prima-
nal). En muchos casos son originadas por estímulos
rio, etc.).
luminosos y auditivos (mioclonias reflejas). Tics • Enfermedades autoinmunes parainfecciosas
Son actos repetitivos, bruscos, rápidos, irregulares, (corea de Sydenham, tosferina, posvacu-
estereotipados, carentes de objetivo, que afectan a nas, etc.).
diferentes grupos musculares (motores, vocales, • Neoplasias (tumores cerebrales, linfomas
etc.); aparecen en cualquier fase del sueño, aumen- primarios del SNC, paraneoplásicas, leuce-
tan en situación de ansiedad y fatiga, y disminuyen mias, etc.).
al leer y realizar actos que requieran cierta concen- • Coreas asociadas a enfermedades neurológi-
tración. Además, los tics pueden ser suprimidos vo- cas:
luntariamente por el enfermo durante algún tiempo, • Enfermedades cerebrovasculares.
pero reaparecen al distraer la atención y se • Enfermedades neurocutáneas.
incrementan tras la supresión. • Enfermedades degenerativas (atrofias
multisistémicas, atrofia olivopontocerebe-
losa, etc.).
360
3. Coreas del desarrollo y del envejecimiento. linguales rápidos), apraxia palpebral (dificultad en
• Senil o crónica del anciano. la apertura y cierre de los ojos a la orden, guiñar un
4. Misceláneas (holoprosencefalia, parálisis ce- ojo alternativamente), disfagia y disartria. Hay,
rebral infantil, esclerosis múltiple, migraña, ade- más, demencia (subcortical) y alteraciones
traumatismo craneal, anemias hemolíticas, que- psiquiá- tricas (personalidad antisocial, depresión,
maduras, descarga eléctrica, corea poscirugía ansiedad con ideas suicidas); menos frecuentes son
cardíaca, otras). la esqui- zofrenia paranoide, los trastornos
obsesivo- compulsivos y muy raras las
Cuadro clínico alucinaciones.
La corea, palabra derivada del griego choreia, que El diagnóstico se sustenta en la historia clínica,
significa danza, es una enfermedad que tiene carac- los antecedentes familiares y el estudio molecular-
terísticas clínicas típicas, en la que aparecen movi- genético (la región cromosómica implicada está en
mientos irregulares, de duración breve, que suelen el brazo corto del cromosoma 4, concretamente
tener localización distal y baja amplitud; son en 4p16,3; estudios posteriores permitieron reducir
involuntarios, violentos como verdaderas sacudidas, más la zona y se identificó un gen denominado
cambian de una zona corporal a otra sin una secuen- IT15, el que sintetiza una proteína a la que se
cia definida, y generalmente se afectan todas las denomina huntingtina, aunque no se conoce cómo
partes del cuerpo. Se presentan movimientos de influye en el desarrollo de las alteraciones
protrusión de los labios o elevación de las cejas, lo patológicas). Es evi- dente en la enfermedad el
que da a la facies un tono característico con exage- fenómeno de anticipación, de tal manera, que la
ración de la mímica. Hay movimientos del cuello, edad de presentación de la do- lencia va
flexión y extensión de los brazos, las manos adop- descendiendo a medida que van pasando
tan posiciones anormales, lo que constituye la mano generaciones en una familia. En la neuroimagen se
coreica; la marcha es desordenada, los miembros encuentra que la TAC al inicio es normal, pero con
inferiores se agitan, arrastran, tropiezan, y se produ- el avance de la enfermedad se visualiza una pérdida
ce la marcha de payaso; la hipercinesia desaparece de la convexidad del núcleo caudado dentro de las
durante el sueño profundo y se asocia a hipotonía astas anteriores del ventrículo lateral, con aumento
muscular. Entre las múltiples causas de esta afec- del índice bicaudado; en la RMN se halla una dis-
ción, en algunas de ellas la corea constituye por sí minución del volumen del núcleo caudado y pu-
misma la enfermedad, porque es el elemento funda- tamen.
mental de ésta (enfermedad de Huntington, corea
Corea de Sydenham
hereditaria benigna, etc.), y en otras es un hallazgo
más en el seno de cuadros más complejos. Sólo se Fue reconocida por Thomas Sydenham en 1686.
expondrán brevemente dos de las formas clínicas más Está por encima de todas las enfermedades
frecuentes. infecciosas en las que se plantea una patogenia
autoinmune de- mostrada tras la fase aguda, y es
Enfermedad de Huntington un criterio mayor de Jones de fiebre reumática. Es
Es una enfermedad descrita por George Huntington más frecuente en las niñas, generalmente aparece
en 1872, que se define como un trastorno progresi- entre los 6 y 15 años de edad, y el comienzo es
vo, con un inicio insidioso de movimientos coreicos, insidioso, varias semanas o meses después de la
alteraciones cognitivas y psiquiátricas, y una histo- infección estreptocócica; al inicio hay trastornos
ria familiar hereditaria positiva. El primer síntoma del comportamiento y después de una o varias
en presentarse es torpeza en el movimiento, y al semanas se presentan los movimien- tos coreicos;
avanzar se hacen evidentes los movimientos coreicos los problemas psíquicos persisten du- rante toda la
que el enfermo es incapaz de suprimir y que aumen- enfermedad y hay gran heterogeneidad de las
tan el trastorno de la marcha; aparecen otras altera- formas clínicas, desde las frustres hasta las
ciones motoras como apraxia orolingual (dificultad malignas con confusión, hipertermia y coma.
para poner la lengua en el carrillo, protruir la len- El diagnóstico es clínico, los títulos de anticuer-
gua, inflar las mejillas y realizar movimientos pos antiestreptocócicos pueden ser negativos por la
demora entre la infección causal y el comienzo de
la sintomatología; más útil sería la búsqueda de
anti- cuerpos anti-ADNasa.
361
El pronóstico es favorable con curación general- da emplear dosis lo más bajas posibles para evitar
mente completa a los 4 o 5 meses, aunque son posi- efectos indeseables como el parkinsonismo, disci-
bles las secuelas psiquiátricas y de alteración de los nesias tardías, acaticia, etc.
movimientos. Estos pacientes son susceptibles de
desarrollar corea durante el embarazo (la corea du- Ansiolíticos y antidepresivos
rante el embarazo sin antecedentes de corea de Se han usado las benzodiazepinas (diazepam y clo-
Sydenham, hace sospechar lupus eritematoso dise- nazepam), imipramina, amitriptilina y nortriptilina;
minado) y con la ingestión de algunos medica- también son útiles los inhibidores de la recaptación
mentos. de serotonina como la fluoxetina, sertralina y
paroxetina.
Tratamiento Se debe recordar que al ser la corea de
A pesar del avance de la ciencia, todavía no se dis- Huntington una enfermedad hereditaria de tipo
pone en todas las coreas de un tratamiento específi- autosómico do- minante, supone un riesgo de
co y efectivo para resolver y controlar totalmente la recurrencia en su des- cendencia de un 50 %;
enfermedad. actualmente, mediante el estudio de la reacción
En la corea de Huntington, el enfoque terapéuti- en cadena de la polimerasa
co tiene algunos pilares, que son: (PCR) del gen IT 15, es posible determinar el diag-
1. Tratamiento etiológico. nóstico presintomático y prenatal de la enfermedad
2. Mejorar la corea. (consejo genético).
3. Mejorar los síntomas psiquiátricos. Se han buscado estrategias para bloquear la
4. Brindar apoyo psicológico a paciente y fami- excitotoxicidad y mejorar el metabolismo energéti-
liares. co mitocondrial; para ello se ensaya con ácido
ascórbico, rivoflavina, carnitina, coenzima Q10,
Neurolépticos remacemide y ketamina, y en vías de investigación
Éstos son los fármacos que más se utilizan en el tra- están los trasplantes de células.
tamiento de la corea, y son muy útiles para tratar las En la corea de Sydenham se recomienda la
alteraciones de la conducta, la irritabilidad y la psi- antibioticoterapia en todos los casos, incluso sin la
cosis; entre los más empleados está el haloperidol, prueba formal de una causa reumática demostrada:
que se usa en dosis menores de 10 mg/día; las penicilina rapilenta, 1 000 000 unidades 2 veces al
fenotiazinas (tioridacina y cloropromacina) y los día IM por 10 días, seguidos por penicilina
agentes que depletan la dopamina, como la tetrabe- benzatínica, 1 200 000 unidades IM mensuales. Los
nazina. También se han utilizado el sulpiride y el corticosteroides no están indicados en todos los pa-
pimozide. Al usar estos medicamentos se recomien- cientes y sólo se reservan para casos severos y fe-
briles.
362
38
INFECCIONES
DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
Las características anatómicas de las estructuras 1. Virus filtrables.
intracraneales del SNC (encéfalo y meninges), con- a) Arbovirus.
dicionan que cuando existe un proceso infeccioso- • Equina oriental.
inflamatorio, cualquiera que sea su causa, las • Equina occidental.
lesiones no quedan limitadas al lugar primariamen- • Venezuela.
te afectado y siempre en la infección inicial menín- • San Luis.
gea, el encéfalo se daña en mayor o menor grado, • Japonesa.
de la misma manera que la participación meníngea b) Enterovirus.
no falta nunca en los casos diagnosticados como • Poliovirus.
encefalitis. Por esta razón, en muchos de los textos
• ECHO.
se prefiere hablar hoy en día de meningoencefalitis
• Coxsackie.
y no de meningitis o encefalitis como afecciones
c) Mixovirus.
del encéfalo y las meninges, sino que engloba tam-
• Parotiditis.
bién las de la médula espinal, como sería el caso de
• Influenza.
las mielitis infecciosas. d) Herpes virus.
Todo lo expuesto ocurre así, por lo que recomen-
• Herpes simple.
damos al estudiante conceptuar estos casos como
• Herpes zóster.
meningoencefalitis con predominio meníngeo o en-
e) Rabia.
cefálico, según sea el cuadro clínico y las alteracio-
f) Mononucleosis infecciosa.
nes anatomopatológicas encontradas. Sin embargo,
2. Bacterias.
para facilitar la comprensión de los cuadros clíni-
a) Piógenas.
cos, en esta obra se mantendrá la división puramen-
• Neumococo.
te descriptiva de meningitis y encefalitis.
• Meningococo.
En otras ocasiones, el proceso infeccioso del en- • Estreptococo.
céfalo es producto de una invasión y colonización • Haemophilus influenzae.
bacteriana en el parénquima cerebral que parte de b) Tuberculosas.
un foco séptico vecino o a distancia, con formación 3. Rickettsias.
de una colección purulenta más o menos limitada: 4. Hongos.
se trata en este caso de un absceso cerebral. a) Histoplasma.
Clasificación etiológica b) Coccidioides.
A continuación se expone la clasificación etiológica c) Torula.
acordada por el Grupo Especial de Síndromes Neu- 5. Espiroquetas.
rológicos de Etiología Infecciosa del MINSAP, que a) Treponema pallidum.
se basa en la moderna concepción de meningoence- b) Leptospira.
falitis para denominar las infecciones del encéfalo 6. Protozoarios.
y las meninges. a) Toxoplasma.
A. Meningoencefalitis primarias. b) Plasmodium.
c) Endamoeba histolytica.

363
7. Cysticercus. CUADRO 38.1
B. Meningoencefalitis secundarias. CLASIFICACIÓN ETIOLÓGICA
1. Sarampión. DE LAS MENINGITIS INFECCIOSAS
2. Rubéola.
I. Meningitis bacterianas
3. Varicela. Neisseria meningitidis.
4. Tos ferina. Haemophilus influenzae.
5. Otras infecciones bacterianas y virales. Streptococcus pneumoniae.
6. Vacunaciones. Estreptococos del grupo B.
Listeria monocytogenes.
a) Rabia. Bacilos gramnegativos.
b) Viruela. Otros (Staphylococcus aureus y S. epidermis).
c) Tos ferina. II. Meningitis tuberculosa y afines
7. Tóxicas. Mycobacterium tuberculosis.
Cryptococcus neoformans.
8. Síndrome de Guillain-Barré. Otros hongos, parásitos, etc.
C. Meningoencefalitis de etiología desconocida. III. Meningitis asépticas o víricas y afines
1. Meningoencefalitis subaguda o de cuerpos Virus.
de inclusión. Leptospira sp.
Treponema pallidum.
Meningitis bacterianas parcialmente tratadas.
Las meningoencefalitis primarias son aquellas en Focos supurados parameníngeos.
las cuales el germen, partiendo de un foco aparente Enfermedades sistémicas (linfoma, leucemia, etc.).
o no, ataca directamente al tejido nervioso, y las se-
cundarias, las que se producen en su mayor parte
a) Meningitis bacterianas.
por un mecanismo alérgico o de hipersensibilidad,
b) Meningitis tuberculosa y afines.
ya que en ellas el agente patógeno no ataca de for-
c) Meningitis aséptica o víricas y afines.
ma directa al encéfalo.
Meningitis bacterianas
Etiología
MENINGITIS Los microrganismos responsables del 80% de las
meningitis bacterianas, llamadas también purulentas,
Concepto son Neisseria meningitidis, Streptcoccus
Se entiende por meningitis la inflamación de las pneumoniae y Haemophilus influenzae. El 20 %
meninges blandas, es decir, de la aracnoides y la restante depen- de de estreptococos del grupo B,
piamadre, cuya expresión anatómica más asequible bacilos gramnega- tivos y Lysteria monocytogenes.
se comprueba en el líquido cefalorraquídeo (LCR). La frecuencia con que se presentan estos
La causa es múltiple y casi siempre infecciosa, aun- gérmenes difiere según las épocas de la vida. Así,
que también las hay no infecciosas, que son mucho en los primeros 3 meses de edad los
menos frecuentes. microrganismos implicados más a menudo son los
estreptococos del grupo B, bacilos gramne-
Clasificación etiológica gativos, como E.coli y Listeria monocytigenes. En
Existen diversas maneras de clasificarlas, según se los niños entre 3 meses y 3 años, los gérmenes res-
siga un orden predominantemente taxonómico mi- ponsables son H. influenzae, N. meningitidis y
crobiológico, o se tengan más en cuenta aspectos S. pneumoniae. En los de más de 3 años y en los
técnicos de cultivo o bien clínicos. Cualquiera de adul- tos sanos, las posibilidades etiológicas se
ellas tiene el inconveniente de no resultar útil en la reducen a N. meningitidis y S. pneumoniae. Por
práctica. Por estas razones se va a emplear una cla- último, en los adultos inmunodeprimidos y en los
sificación mixta, clínico-microbiológica, y la que ancianos, el es- pectro de posibilidades etiológicas
resulta más útil para el enfoque terapéutico de los se amplía de nue- vo e incluye, además de N.
pacientes. De acuerdo con ella se distinguen (cua- meningitidis y S. pneumoniae, bacilos
dro 38.1): gramnegativos y Lysteria monocytogenes. La
simple consideración de edad
364
permite vislumbrar las posibilidades etiológicas más c) Extensión por contigüidad desde un foco su-
frecuentes. Este hecho está dotado de interés tera- purado próximo, como los senos paranasales, mas-
péutico extraordinario, dado que la urgencia con que toiditis supurada o ruptura de un absceso cerebral
debe prescribirse la terapéutica en la meningitis bac- en las meninges. La posibilidad del paso intracra-
teriana, obliga a poner en práctica un tratamiento neal directo de los microrganismos por las vénulas
empírico, sin esperar los resultados del laboratorio desde la nasofaringe, sólo está aceptada por al-
de microbiología. gunos.

Patogenia Anatomía patológica


Las bacterias alcanzan las meninges por las siguien- El exudado inflamatorio purulento que se origina
tes vías: en las meninges blandas, se vierte en el LCR y se
a) Vía hematógena. Es la más frecuente de todas. ex- tiende por el espacio subaracnoideo a todo lo
Los microrganismos responsables del 80 % de las ancho y largo del neuroeje. Por motivos
meningitis, es decir, N. meningitidis, S. pneumoniae anatómicos tiende a acumularse en las cisternas
y H. influenzae, son todos ellos habitantes, más o basales y en el interior de los surcos cerebrales. La
menos habituales, de la nasofaringe y la orofaringe, membrana subaracnoi- dea exterior se comporta
en donde normalmente no resultan dañinos. Sin como una barrera de nota- ble eficacia en la
embargo, por motivos desconocidos, de vez en cuan- contención de la inflamación; sin embargo, en el
do pasan a la sangre y, por vía hematógena, llegan a 15 % de los niños con meningitis bacteriana se
las meninges y colonizan en ellas. Todos estos mi- forman efusiones subdurales que, en general, son
crorganismos son capsulados. Así, pues, es posible estériles; sólo en pocas ocasiones se in- fectan y
que la cápsula, con su propiedad antifagocítica, ten- entonces se transforman en empiemas
ga algo que ver con la diseminación. El polisacárido subdurales.
capsular podría, además, conferir a los gérmenes También la piamadre se comporta como una barre-
cierto tropismo meníngeo, acaso por la presencia de ra eficiente que impide la infección de la sustancia
receptores de superficie en las meninges, pero nada gris cerebral y subyacente. La inflamación menín-
de esto está esclarecido. Antes de la invasión del gea afecta con cierta facilidad las estructuras que
torrente circulatorio se producen, a veces, infeccio- atraviesan el espacio subaracnoideo, como venas,
nes víricas de las vías aéreas superiores, cuyo papel arterias y nervios craneales. Así, cabe constatar
como elemento favorecedor de dicha invasión trom- boflebitis de las venas corticales con estasis
hemática es dudoso. El fracaso de algunos de los venoso e infarto cerebral. Las pequeñas
mecanismos de defensa del huésped contra la agre- arterias de la piamadre también se lesionan, con
sión, explica la propensión a determinadas infeccio- formación de aneurismas y, de nuevo, infarto
nes. Así, la anemia de células falciformes, la asplenia, cerebral. Los pares craneales más dañados son, por
las deficiencias inmunoglobulínicas congénitas o ad- razones topográficas, el III y el VI.
quiridas y el alcoholismo, predisponen a las infec- La ventriculitis, que como ya se ha comentado es
ciones por S. pneumoniae. Muchas veces los constante en las meningitis, rara vez evoluciona ha-
gérmenes llegan a las meninges desde otros puntos cia el empiema ventricular. En cambio, la obstruc-
de origen. Tal es el caso, por ejemplo, del S. ción del LCR por adherencias en el seno del
neumoniae, que puede hacerlo a partir de un foco sistema ventricular y espacio subaracnoideo es
pulmonar; del S. aureus, desde una endocarditis, y algo más común, lo que puede conducir a la
de gramnegativos, desde el tubo digestivo y las vías hidrocefalia obs- tructiva. El hidrocéfalo
genitourinarias. comunicante es insólito. En algunos casos
b) Llegada directa de los gérmenes a las menin- sobreagudos —casi todos ellos por meningitis
ges por soluciones de continuidad naturales (mielo- meningocócica— predomina el edema ce- rebral con
meningocele) o artificiales (fractura craneal, fisura posibilidad de hernia cerebelosa o del ló- bulo
de la lámina cribosa del etmoides, intervención qui- temporal, y peligro de muerte súbita por
rúrgica, derivación ventriculoauricular o punción compresión troncoencefálica y medular.
lumbar).
Cuadro clínico
Clásicamente, la enfermedad comienza de forma
brusca con fiebre, cefalea intensa, náuseas y vómitos,
365
dolor de espalda y de cuello y decaimiento general. Diagnóstico
Son frecuentes la disminución del nivel de concien- El diagnóstico clínico es en general fácil en los ca-
cia y las convulsiones. En raras ocasiones, los sínto-
sos típicos. Debe también sospecharse una menin-
mas iniciales consisten en dolor abdominal, delirio,
gitis en aquellos pacientes que presenten un cuadro
o en un síndrome confusional. La exploración física
de obnubilación o de cefalea, o confusión mental
pone de manifiesto la rigidez de nuca y los signos
de comienzo brusco, aunque su temperatura esté
de Kerning y de Brudzinski positivos; estos sínto-
lige- ramente elevada. El diagnóstico se
mas clásicos del síndrome meníngeo en ocasiones
están ausentes, tanto en pacientes muy jóvenes como establece de manera definitiva mediante el análisis
en los de edad avanzada, o si existe un grado de ob- del LCR. En el diagnóstico diferencial deben
nubilación intensa. Aparte del síndrome meníngeo considerarse otras meningitis infecciosas, las
clásico, hay ciertas características clínicas que recurrentes de los síndro- mes de Behçet y Mollaret
corresponden a las diversas formas etiológicas. Así, y otros procesos intracra- neales supurativos.
en las meningitis meningocócicas, a veces de evo- En el diagnóstico de laboratorio se encuentra,
lución fulminante, pueden observarse lesiones cutá- generalmente, una leucocitosis en la sangre (10 000
neas hemorrágicas y, en ocasiones, colapso a 40 000/mm3 o 10,0 a 40,0 . 109/L), aunque a
circulatorio. Aunque la presencia de petequias, púr- veces el hemograma es normal. En casos de
pura o equimosis en un paciente afecto de meningitis deshidrata- ción, los electrólitos y la urea en la
aguda es casi sinónimo de meningitis meningocóci- sangre son tam- bién anormales. El LCR es
ca —lo que orienta el tratamiento inmediato—, hay hipertenso (entre 200 y 500 mmH2O), de color
que recordar que, raramente, S. neumoniae y H. in- opaco o purulento y con- tiene gran número de
fluenzae originan lesiones semejantes. células con predominio de polimorfonucleares
No es insólito el hallazgo de meningitis víricas, neutrófilos. El recuento oscila en- tre 2 000 y 10
sobre todo por Echovirus 9, que cursan con lesiones 000/mm3 (rara vez más de 20 000/mm3). Sin
purpúricas que recuerdan a la del meningococo. Debe embargo, en estadios muy precoces de la en-
sospecharse la meningitis neumocócica en pacien- fermedad es posible hallar recuentos muy bajos (10
tes con infecciones pulmonares, otitis media aguda a 20 células/mm3) que se prestan a error. Por el
o crónica, conjuntivitis purulenta, rinorrea de LCR con- trario, la pleocitosis superior a 50 000/mm3
secundaria a anomalías del desarrollo o a un trau- debe mo- tivar la sospecha de ruptura de un
matismo, en enfermos afectos de anemia falciforme absceso cerebral preexistente.
y en alcohólicos o esplenectomizados. Al evolucionar la enfermedad, aumenta la pro-
Las meningitis por Haemophilus suelen ocurrir ducción de linfocitos, histiocitos y células plasmáti-
en niños pequeños y van precedidas de infecciones cas. El valor de las proteínas en el líquido está
óticas o de las vías respiratorias altas. elevado y oscila entre 500 y 1 200 mg/dl, y existe
Por último, otros tipos de meningitis bacterianas un descenso en el contenido de glucosa, con niveles
acostumbran presentarse en el terreno de cuadros clí- generalmente inferiores a 20mg/dl (<1,11 mmol/L).
nicos más atípicos. Así, una meningitis en un pa- En la mayoría de los casos, la tinción de Gram
ciente afecto de furunculosis o sometido a una del sedimento del líquido permite identificar el ger-
operación neuroquirúrgica reciente, sugiere una in- men patógeno. El cultivo del LCR efectuado antes
fección meníngea por estafilococo. La invasión me- de iniciar el tratamiento es positivo en alrededor
níngea por enterobacterias, Listeria, Mima-Herella del 70 % de los pacientes. La proteína-C reactiva es
y seudomonas, se ve favorecida por la presencia de positiva en el 97 % de las meningitis bacterianas,
un absceso cerebral, enfermedades asociadas a un con una especificidad del 86 %, lo que resulta muy
déficit inmunitario o defectos óseos craneales. útil para diferenciarlas de las meningitis víricas y
Los déficit neurológicos focales son raros y se afines.
observan con más frecuencia en meningitis por H. Deben practicarse radiografías de tórax, cráneo y
influenzae y en las neumocócicas. En estas últimas senos paranasales.
son también comunes las lesiones de los pares cra- El interés en las técnicas inmunológicas y
neales. seroló- gicas ha aumentado en los últimos años, pero
todavía se hayan limitadas a ciertos centros
especializados. Consisten en detectar los antígenos,
en especial del
366
H. influenzae tipo B y, con menor frecuencia, del En los adultos, la pauta es similar, con un máximo
meningococo (grupos A, B, C y Y) y del neumoco- de 600 mg en cada administración.
co, mediante técnicas de aglutinación con látex (LA) Actualmente se han desarrollado vacunas útiles
o de inmunoelectroforesis a contracorriente (CIE). en la prevención de la meningitis por el serotipo B
Ellas permiten un diagnóstico rápido de casos en que de H. influenzae. Su generalización en algunos paí-
la tinción de Gram haya fracasado, por ejemplo, por ses parece haber provocado una disminución signi-
el empleo muy precoz de antibióticos, que no curan ficativa de su incidencia.
la meningitis, pero enmascaran los resultados mi- En el caso del meningococo, en nuestro país se
crobiológicos.
elaboró la vacuna antimeningocócica contra los
Evolución, pronóstico gru- pos B y C, que se indica a los niños y adultos
que conviven en comunidades cerradas, escuelas
y complicaciones inter- nas, círculos infantiles, campamentos
En los pacientes sometidos a un tratamiento adecua- militares, zo- nas populosas o comunidades de
do en casos de meningitis meningocócica o por H. alto riesgo. El esquema de vacunación consiste en
influenzae, la mortalidad es actualmente del 5 % o 2 dosis de 0,5 ml con un intervalo de 6 u 8
menos. Los de comienzo brusco, que cursan con semanas. La segunda dosis es imprescindible para
bacteriemia y coma, y los que ocurren en personas lograr la protección. Este es- quema es válido a
de edades extremas o con enfermedades sistémicas partir de los 3 meses de edad.
debilitantes (diabetes mellitus, alcoholismo, mielo-
ma) tienen peor pronóstico. En ellos predominan las
Tratamiento de la enfermedad
meningitis por gérmenes gramnegativos cuya mor-
Medidas generales. El tratamiento de estos pacien-
talidad, hasta hace muy poco, era del 80 %. La in-
tes incluye las medidas de soporte necesarias en
troducción de cefalosporinas de tercera generación y
cual- quier infección aguda grave. La asistencia
monobetalactámicos ha mejorado esa cifra de
intensiva puede ser imprescindible en las primeras
manera sustancial. La mortalidad en la meningitis
horas, a fin de mantener las adecuadas funciones
neumocócica, que es particularmente grave cuando
respirato- rias y hemodinámicas, vigilar la
se asocia a neumonitis y endocarditis, es de 30 %.
administración de líquidos, controlar la fiebre y
En la meningitis por H. influenzae y por neumo-
las convulsiones, e identificar y tratar los
coco, los trastornos neurológicos residuales son bas-
eventuales trastornos hidro- electrolíticos o de la
tante comunes (aproximadamente un 30 % de
coagulación.
pacientes). Las secuelas más frecuentes incluyen
demencia, epilepsia, sordera, hemiplejía e hidroce-
Tratamiento farmacológico
falia.
A. Antimicrobianos. Al hablar de la conducta
Tratamiento que se debe seguir en una meningitis con
líquido purulento, es decir, bacteriana, hay
Tratamiento preventivo que insistir en la urgencia de ésta y en la
La prevención comprende dos aspectos: necesidad de ad- ministrar una terapéutica
a) La quimioprofilaxis de los contactos. empírica, sin esperar los resultados de los
b) La imnunización pasiva de los individuos en estudios microbiológicos.
riesgo. 1. Meningitis meningocócica. N. meningitidis,
agente causal de la meningitis meningocó-
El objetivo de la quimioprofilaxis es erradicar las cica, es muy sensible a la penicilina G. Por
bacterias de la nasofaringe de los contactos; se utili-
otro lado, como la mayor parte de los anti-
za para la prevención de los casos secundarios ante
bióticos, la penicilina G atraviesa con difi-
meningitis por N. meningitidis y H. influenzae. La
cultad la barrera hematoencefálica y sólo se
rifampicina por vía oral es el fármaco de elección
consiguen concentraciones equivalentes al 15
en dosis de 10 mg/kg c/12 h durante 2 días en el
caso del meningococo, y de 20 mg/kg 1 vez al día a 25 % de las séricas; por tanto, para alcan-
durante 4 días para el H. Influenzae, en los niños. zar en el LCR niveles 10 veces superiores a
los que serían el bactericida en el suero —
pues- to que los niveles inferiores no son
efica- ces—, es preciso administrar dosis
de 24 millones de unidades diarias por vía
EV, ya
367
sea fraccionada cada 2 h o en infusión conti- por contigüidad de un foco supurado veci-
nua. Aunque desde 1983 se han aislado ce- no, como sinusitis o mastoiditis.
pas de N. meningitidis productoras de 3. Meningitis por H. influenzae tipo B. El tra-
beta-lactamasa y, por tanto, resistentes a la tamiento clásico estriba en la
penicilina G, éste es un hecho absolutamen- administración de cloranfenicol en dosis de
te excepcional, y aunque preocupante de cara 4 g diarios EV. Este fármaco, aunque en
al futuro, no obliga, de momento, a modifi- general es bacte- riostático, se comporta
car la terapéutica con penicilina. En caso de como bactericida frente a H. influenzae.
alergia a la penicilina, se recurrirá, como al- Sin embargo, su toxi- cidad potencial sobre
ternativa, al cloranfenicol en dosis de 4 a 6 g la medula ósea moti- vó que fuera
diarios EV, dada la facilidad con que este desplazado por la ampicilina, de acción
antibiótico atraviesa la barrera hematoen- bactericida y carente casi de toxi- cidad,
cefálica. En la actualidad se ha impuesto el que se administra a razón de 12 g dia- rios
uso de una cefalosporina de tercera genera- por vía EV. El problema surgió cuando un
ción, la cefotaxima, en dosis de 8 g diarios número creciente de cepas de H. influen-
EV. La duración del tratamiento es de 2 se- zae se volvieron resistentes a la ampicilina.
manas. A partir de 1990 se preconiza la asociación
El empleo de la penicilina en el caso habi- ampicilina-cefotaxima, que muestra igual
tual ofrece una mayor seguridad de curación eficacia y evita el riesgo de antagonismo, o
microbiológica sin riesgo de efectos tóxicos la monoterapia con cefotaxima (200 mg/kg/
y de repercusión sobre el costo de la tera- día) o ceftriaxona (100 mg/kg/día) que, se-
péutica. Después del tratamiento y para erra- gún parece, produce resultados equiparables.
dicar N. meningitidis de la orofaringe (lo que
4. Meningitis por estreptococos del grupo A.
no se consigue con tratamiento penicilínico),
Estos gérmenes son muy sensibles a la
hay que administrar rifampicina, como se
peni- cilina, por lo que no plantean
hace en la quimioprofilaxis de las epidemias.
problemas te- rapéuticos.
2. Meningitis neumocócica. Como también S.
5. Meningitis por Listeria monocytogenes. Se
pneumoniae es muy sensible a la terapéutica
trata con ampicilina en dosis de 12 g diarios
con penicilina (la concentración inhibitoria
por vía EV.
mínima <0,01 ug/ml), el tratamiento es el
6. Meningitis por Staphylococcus aureus y
mismo que para la meningitis meningocóci-
Sta- phylococcus epidermis. Si son
ca (24 millones de U diarias de penicilina G,
sensibles a la cloxacilina, se tratan con este
EV) y durante idéntico tiempo. A diferencia
antibiótico en dosis de 12 g EV diarios. En
de la sensibilidad uniforme del meningococo
caso contrario, se administra vancomicina.
a la penicilina G, en los últimos años han
7. Meningitis por gérmenes gramnegativos.
surgido cada vez más casos de resistencia
Constituye un problema terapéutico muy
del neumococo a este antibiótico y se han
serio, que hasta hace poco deparaba una
descrito dos tipos de resistencia: uno muy
mortalidad de un 80 %. La aparición de las
raro que corresponde a cepas totalmente re-
cefalosporinas de tercera generación ha re-
sistentes a la penicilina y a otros varios anti-
sultado providencial. Aunque éstas no atra-
bióticos, y un segundo que hace resistencias
viesan mejor la barrera hematoencefálica
parciales. Para el primer tipo se recomienda
que los demás antibióticos betalactámicos,
el tratamiento con vancomicina y para el
están dotadas de tal actividad intrínseca
segundo se aconseja, como en la meningitis
sobre los bacilos gramnegativos que, aun
meningocócica, utilizar las cefalosporinas de
en concen- traciones muy reducidas,
tercera generación, como la cefotaxima, en
resultan activas. Existe experiencia
dosis de 300 mg/kg/día, con muy buenos
documentada de resulta- dos satisfactorios
resultados. Se recurrirá a la cirugía si la me-
con el uso de cefalospori- nas, tales como
ningitis neumocócica es una complicación
cefotaxima, ceftriaxona y ceftacidima.
Esta última sólo se administra cuando el
germen causal es P. aeruginosa.
368
B. Dexametasona. La función de los esteroides muestra una localización basal preferente y asienta
en la terapéutica de la meningitis continúa sien- sobre todo en la región optoquiasmática, debajo de
do controvertida. En teoría, disminuyen la per- los pedúnculos, en la protuberancia y en el bulbo.
meabilidad de la barrera hematoencefálica, con Microscópicamente se encuentran afectados los
reducción del edema cerebral citotóxico y vasos meningopiales, con periarteritis y
vasogénico, y de la hipertensión intracraneal endarteritis, en ocasiones obstructivas. El resto de
subsiguiente. Ello mejora la perfusión cerebral. las meninges muestra una inflamación
La dexametasona, a razón de 0,15 mg/kg EV exudativocongestiva difu- sa, con posibilidad de
cada 6 h, se puede administrar cuando hay observar una granulación amarilla caseificada,
coma, deficiencias locales y otros signos de muy característica. En fases avanzadas de la
hipertensión intracraneal. enfermedad no tratada o tratada de manera
insuficiente, cabe hallar adherencias en las
Meningitis tuberculosa proximidades del cuarto ventrículo y epéndimo que
dificultan la circulación del LCR y originan hidro-
y afines cefalia.
También es posible encontrar aracnoiditis espi-
Etiología nal con compresión medular, meningitis adhesiva
Se trata de un síndrome meníngeo de comienzo y evo- suboccipital con síndrome compresivo de la fosa
lución en general subagudos, y causado la inmensa cerebral posterior, así como aracnoiditis optoquias-
mayoría de las veces por Mycobacterium tuberculo- mática, capaz de originar ceguera. Igualmente, ne-
sis. Sin embargo, aunque con poca frecuencia, cier- crosis parietal de las arterias basilares y corticales y
tos hongos como Cryptococcus neoformans o zonas de reblandecimiento en la cápsula interna,
Coccidioides immites, e incluso enfermedades no hipotálamo, vías ópticas y corteza, que se manifiestan
infecciosas como linfomas y leucemias, son también por paresias, ceguera y otras secuelas permanentes.
responsables del síndrome. Es por ello que algunos Cuadro clínico
autores clasifican este grupo de meningitis como
En el curso de la meningitis tuberculosa se identifi-
subagudas o crónicas, y reservan la denominación can 3 períodos.
de bacterianas agudas para las descritas anteriormente. 1. Período prodrómico. Es, a veces, prolongado
Patogenia y dura varias semanas. El paciente aqueja
Mycobacterium tuberculosis siempre alcanza las aste- nia, inapetencia, adelgazamiento y
meninges por vía hematógena a partir de un foco febrícula.
caseoso situado a distancia. Puede tratarse de la 2. Período de comienzo. Se instaura cefalea, al
adenopatía hiliar del complejo primario o de cual- principio sorda, que se intensifica y se torna
quier otro foco. Hace algunas décadas, esta enfer- difusa; se acompaña de vómitos, con o sin
medad afectaba casi exclusivamente a niños y náu- seas. La febrícula se transforma en fiebre
aparecía a consecuencia de una diseminación pre- de 38 o 390C. Se establece hiperestesia
coz posprimaria; en nuestros días esta eventualidad sensorial so- bre todo a la luz (la fotofobia
es excepcional, por lo que resulta mucho más co- es uno de los signos habituales). El
mún el establecimiento de una meningitis tubercu- estrabismo por parálisis del VI par es muy
losa en ancianos portadores de algún foco muy común. Pueden aparecer otras paresias de los
antiguo, en los cuales ocurre una inmunodepresión nervios craneales, por ejemplo, del facial.
relacionada con la edad o de cualquier otra natura- La exploración demuestra la típica rigidez de
leza. nuca, así como los signos de Kernig y
Brudzinski. El examen del fondo de ojo revela
Anatomía patológica a veces la presencia de tubérculos coroideos.
Como en todas las meningitis, la inflamación de las El edema papilar sólo aparece en fases
meninges es difusa. Sin embargo, la tuberculosis avanza- das de la enfermedad, cuando ya se
han esta- blecido complicaciones. La
presencia de polipnea y en ocasiones
cianosis, debe sugerir
369
siempre la asociación de tuberculosis miliar pul- enfermedad suele haber predominio de polimorfo-
monar. nucleares en el LCR, y con la meningitis vírica, si
3. Curso de la enfermedad. Si no se trata del modo la cifra de glicemia es normal. También hay que
adecuado, se instaura adelgazamiento rápido, hacer el diagnóstico diferencial con las meningitis
estado estuporoso, posición en gatillo de fusil fúngi- cas. Los hongos más a menudo
y muerte en coma. responsables son Cryptococcus neoformans, y
mucho más raramen- te, Coccidiodes immitis. La
Diagnóstico histoplasmosis y la blastomicosis sólo producen
Diagnóstico positivo meningitis en casos excepcionales. De cualquier
Características del LCR. Casi siempre es límpido y forma, la meningitis fúngica origina un cuadro
clínico biológico indife- renciable de la meningitis
transparente, aunque en ocasiones presenta ligero as-
tuberculosa, aunque sirve de pista diagnóstica la
pecto opalino. Si se le deja reposar, puede formarse
concomitancia con síntomas de hipertensión
un tenue retículo de fibrina en la superficie. El exa-
intracraneal. En ocasiones, este tipo de meningitis
men bioquímico demuestra que existe pleocitosis de
presenta remisiones espontáneas y pro- duce un
alrededor de 250 elementos/mm3, aunque a veces
cuadro clínico de años de duración. Se pre- senta
alcanza los 1 500 o incluso más. Existe un claro pre- de manera exclusiva en personas con
dominio de células mononucleadas, pero en las fa- enfermedades subyacentes, tales como linfomas, leu-
ses iniciales de la enfermedad cabe asistir a un cemias, diabetes o bajo tratamiento corticoideo. El
predominio polimorfonuclear transitorio, capaz de diagnóstico de la meningitis criptococócica se basa
suscitar confusiones con las meningitis bacterianas. en la tinción con tinta china del LCR, cultivos del
La proteinorraquia está aumentada y oscila entre 50 líquido en sangre y orina en medio de Sabouraud, y
y 500 mg/dl. La glucorraquia es baja, pero no como pruebas serológicas (antígeno criptococócico). Éste
en las meningitis purulentas. aparece positivo en el LCR en más de 90 % de los
El hallazgo de M. tuberculosis en el LCR, por los casos comprobados por estudios microbiológicos. La
diferentes tipos de tinción, es muy difícil. El cultivo presencia del factor reumatoideo puede causar fal-
en medio de Löwenstein resulta positivo en el 75 % sos positivos de este antígeno en la sangre, pero no
de los casos, pero es preciso esperar de 4 a 6 sema- en el LCR. La meningitis por Coccidioides immitis,
nas, por lo que se impone instituir la terapéutica sin histoplasmosis y blastomicosis sólo se ve en áreas
contar con esta prueba. Para obviar este inconve- endémicas.
niente, se han introducido varias técnicas rápidas
(como determinación de antígenos y anticuerpos de Curso y pronóstico
M. tuberculosis por ELISA, aglutinación de par- Antes de disponerse del tratamiento
tículas de látex y otras) que parecen ofrecer buenos antituberculoso eficaz, el curso era fatal, tras varias
resultados, pero con las que se tiene poca experiencia. semanas o me- ses de evolución. En la actualidad,
La dosificación de adenosindesaminasa (ADA) pa- si la terapéutica se aplica a tiempo, la mortalidad
rece importantísima. Esta enzima interviene en la no supera el 10 %, salvo en los extremos de la
degradación de las bases púricas y se halla, sobre todo, vida, en donde llega al 25 %.
en los linfocitos T maduros. Se encuentra muy elevada En cambio, la demora del tratamiento origina
en el LCR de la meningitis tuberculosa (15,7 U/L), hasta un 25 % de secuelas neurológicas
mientras que en otras meningitis no supera las 3 U/L. irreversibles. Tratamiento
La sensibilidad diagnóstica de esta prueba es del 100 %
y la especificidad del 95 %. La administración de antibióticos debe iniciarse en
La reacción en cadena de la polimerasa (PCR) es cuanto exista una sospecha diagnóstica razonable.
un método prometedor, pero todavía fuera del al- El tratamiento se comienza con isoniacida, 300
cance de la mayoría de los laboratorios. a 600 mg diarios; rifampicina, 600 mg diarios;
pira- zinamida, 1,5 a 2 g diarios (en mayores de 50
Diagnóstico diferencial años, administrar 0,5 g); etamburol, 15 a 25 mg/kg,
Hay que establecer la diferencia con la meningitis y es- treptomicina, 1 g diario (0,5 g diario en
supurada, debido a que en las fases precoces de la mayores de 50 años). Estas drogas deben tomarse
en horas de la mañana durante 12 meses, con
límites entre 9
370
y 18 meses, lo que depende de la situación del pa- Otras enfermedades víricas que más raramente
ciente y la respuesta al tratamiento. evolucionan con este síndrome, son la hepatitis in-
En los últimos años se ha detectado la aparición fecciosa, la mononucleosis infecciosa, la neumonía
de resistencia a los tuberculostáticos de primera lí- atípica primaria y el SIDA. Las leptospirosis, pro-
nea en enfermos con SIDA; en esta situación la me- ducidas por espiroquetas, son causa también de una
ningoencefalitis tuberculosa carece de tratamiento meningitis de tipo linfocitario. Lo mismo ocurre
efectivo. Complicaciones como la hidrocefalia, epi- con Borrelia burgdorferi, responsable de la
lepsia o la secreción inadecuada de ADH, requieren enfermedad de Lyme.
tratamiento específico. Existen otros tres grupos de enfermedades capa-
Algunos autores recomiendan la administración ces de producir una reacción meníngea de tipo
sistemática de corticosteroides sin que existan evi- linfocitario o mononuclear aparentemente estéril:
dencias que la sustenten; no obstante, en pacientes
a) Focos piógenos parameníngeos, como sinusi-
con deterioro del nivel de conciencia, edema cere-
tis, mastoiditis crónica y absceso cerebral.
bral, hipertensión intracraneal o afección vascular o
b) Ciertas infecciones meníngeas específicas en
de los nervios craneales, se debe emplear dexame-
las que es difícil aislar el microrganismo,
tasona, 4 mg cada 6 h, con un descanso paulatino a
como la sífilis, la tuberculosis y la
partir de la 2da. o 3ra. semana.
criptococosis.
En el caso de las meningitis fúngicas, el tratamien-
c) Invasión neoplásica de las meninges, como
to se efectúa con anfotericin B (ver el capítulo “Mi-
leucemia, linfomas y carcinomas. En estos ca-
cosis profundas”).
sos de meningitis tumoral existe con frecuen-
cia un descenso importante del contenido de
Meningitis aséptica glucosa del líquido.
o vírica y afines Hay otros grupos de enfermedades de etiología
El síndrome de la meningitis aséptica se caracteriza oscura, capaces de producir una reacción leptome-
por síntomas y signos de irritación meníngea, de níngea del tipo de las meningitis asépticas, como
comienzo agudo con pleocitosis en el LCR y culti- son: a) Las denominadas uveoneuroaxonitis, que
vos casi siempre bacteriológicamente estériles. Este in- cluyen la enfermedad de Behçet, la enferme-
síndrome, que cuando es producto de una infección dad de Vogt-Koyanagi y la enfermedad de
viral se debe denominar meningitis viral, suele tener Harada.
una etiología heterogénea y un comienzo y evolu- b) La meningitis multirrecurrencial de Mollaret.
ción subagudos, por lo que algunos autores inclu- c) Las meningitis inmunoalérgicas, que aparecen
yen muchos de sus casos, que se mencionan más en la enfermedad del suero y en el curso de
adelante, en el ya referido grupo de las meningitis afecciones del tejido conectivo, como el lupus
subagudas o crónicas. eritematoso diseminado.

Etiología Por último, ante un cuadro de meningitis


La mayor parte de las meningitis asépticas están pro- aséptica debe pensarse en la posibilidad de una
ducidas por agentes víricos, y en estos casos el nom- meningitis bacteriana parcialmente tratada.
bre de meningitis linfocitaria quizás sea el más
apropiado. Entre éstos, los más comunes son los Patogenia
enterovirus no polio (responsables del 75 % de los La mayor parte de las meningitis asépticas son in-
casos en los que se llega a establecer el diagnóstico fecciones virales del SNC, que a su vez constituyen
etiológico), seguidos del virus de la parotiditis, her- el resultado final de una afectación previa a otros
pes simple (tipo II), varicela zóster, adenovirus y el tejidos u órganos por un virus cuya naturaleza pue-
de la coriomeningitis linfocitaria. de ser diversa.
La mitad de los casos producidos por los virus El mecanismo de producción de una meningoen-
herpes simple y varicela zóster cursa sin lesiones cefalitis viral consta de tres momentos evolutivos.
vesiculosas. En primer lugar, la exposición al virus lo pone en
371
contacto con una superficie externa del cuerpo del aparición de manifestaciones respiratorias iniciales
paciente, donde por lo general ocurre su replicación. es más común en la coriomeningitis linfocitaria, así
En el caso de los enterovirus, éstos se encuentran en como en la producida por otros virus trasmitidos
los líquidos corporales o las excretas de las per- por insectos. El aumento de volumen de las
sonas infectadas, quienes los trasmiten de manera glándulas parótidas en los días que precedieron al
directa o por los alimentos, fomites u otros materia- cuadro o concomitando con éste, sugieren la
les por ellos contaminados. Los arbovirus se propa- presencia del virus de la parotiditis. La aparición
gan a través de las picadas de artrópodos. de una erupción cutánea hace pensar en infección
En una segunda fase ocurre una viremia sistémi- por virus Coxsackie o ECHO, así como en este
ca y con ella la multiplicación del virus en órganos último cuadro las lesio- nes son maculopapulares
viscerales. La mayoría de los virus implicados en la punteadas o con ronchas que afectan las
génesis de esta afección, llegan al sistema nervioso extremidades y ocurren fundamen- talmente en el
por vía hemática, con excepción del virus de la ra- verano. Así mismo, la herpangina con vesículas de
bia, del herpes y quizás el de la poliomielitis. gran tamaño y muy dolorosas en el ter- cio
La última etapa corresponde a la respuesta infla- posterior de la orofaringe, puede ser producida por
matoria de los tejidos de cuya magnitud, como con- el virus Coxsackie. De igual forma, el Coxsackie B
secuencia de la distribución de la infección y el efecto origina una pleurodinia secundaria, con dolor to-
directo del virus, dependerán los síntomas y signos rácico muy intenso y agravado por el esfuerzo de la
clínicos que se presenten. respiración profunda o la tos.

Cuadro clínico Diagnóstico


Esta enfermedad tiene una evolución clínica relati- Diagnóstico positivo
vamente benigna y de corta duración, y lo caracte- El diagnóstico de una meningitis viral se establece
rístico es la recuperación del paciente en pocos días. ante un paciente con síntomas y signos sugestivos
Los síntomas y signos producidos por la menin- de irritación meníngea y cuyas manifestaciones clí-
gitis viral son similares, con independencia del vi- nicas no tienen la severidad de las de causa bacte-
rus implicado. El inicio del proceso es por lo general riana; por supuesto, apoyados éstos por el examen
agudo, las manifestaciones clínicas iniciales son de del LCR, que resulta de carácter esencial. De forma
índole general y como pródromos se instalan sínto- habitual éste presenta aumento de la presión y un
mas de tipo catarral; es común que la sintomatolo- aspecto claro o ligeramente turbio. En ocasiones, al
gía propia de la irritación meníngea (cefalea, inicio del cuadro clínico se encuentra un líquido
fotofobia, rigidez de nuca), aunque más leve que en acelular o con mayoría de linfocitos polimorfonu-
la meningitis bacteriana, sea precedida o se acom- cleares, pero poco después aparece la pleocitosis tí-
pañe de fiebre (39 a 400), malestar, apatía, mialgia, pica con predominio linfomonocitario; el recuento
síntomas respiratorios y gastrointestinales, como celular oscila entre 10 y 100 células/mm3 y sólo en
náuseas y vómitos, y exantema cutáneo. casos excepcionales éstas aumentan por encima
El síntoma más llamativo del SNC es la cefalea de 1 000/mm3; es característico que el contenido de
frontal retrorbitaria muy intensa; la afectación del glucosa sea normal o ligeramente disminuido; suele
nivel de conciencia es muy escasa y aunque habi- haber un incremento de las proteínas (50 a 100 mg/dl).
tualmente el paciente permanece orientado y con ca- En el LCR también es posible observar bandas de
pacidad de razonamiento, puede presentar IgG oligoclonal. La tinción de Gram no demuestra
somnolencia y confusión ligera. Es muy infrecuente la presencia de microrganismos, y los cultivos para
la aparición de estupor y coma. Hay rigidez de nuca bacterias y hongos resultan negativos. Las altera-
y en la mayoría de los casos aparecen signos de ciones sistémicas del laboratorio varían según el
Kernig y Brudzinski, aunque éstos faltan con fre- agente causal. Por lo general, se observa una leuco-
cuencia en enfermos cuya irritación meníngea es penia con linfocitosis relativa.
mínima. El diagnóstico etiológico se basa en el cuadro
En ocasiones, las manifestaciones clínicas proce- clí- nico, los métodos serológicos y el aislamiento
dentes de otros órganos permiten sospechar cual es del virus en las heces fecales, orina y
el virus responsable de la infección del SNC. La secreciones faríngeas, pues por lo general es inútil
el intento de identificarlo en la sangre. Es de
provecho el recono-
372
DIFERENCIAS DEL LÍQUIDO CEFALORRAQUÍDEO EN LAS FORMAS PRINCIPALES DE MENINGITIS

Índices Meningitis Meningitis


Meningitis bacteriana
tuberculosa viral
Aspecto del líquido Turbio Claro (es opalino) Claro
Células por mm 3
2 000-5 000 o más 100 – 400 100-700 o <100
Tipo de células Polinucleares Linfocitos Linfocitos
Presión ++++ +++ ++
Proteínas >100 mg% >100 mg% < 100mg% o normal
Glucosa < 40 mg% < 40 mg% > 60mg% o normal
Cloruros < 750 mg% < 750 mg% Normal
cer al virus causal de la afección, a pesar de que no esta enfermedad rara vez causan la muerte o esta-
exista una conducta específica para cada uno de ellos, blecen secuelas; sin embargo, existen gérmenes de
pero esto resulta fundamental para establecer un pro- reconocida letalidad, como el virus de la rabia y el
nóstico y tomar las medidas de control epidemioló- herpes simple.
gico.
Tratamiento
Diagnóstico diferencial No existe un tratamiento específico para la menin-
En cuanto al diagnóstico diferencial, la meningitis gitis viral aguda, excepto la herpética; la
bacteriana parcialmente tratada es la que con más terapéutica va dirigida a brindar cuidados
frecuencia se confunde con una meningitis viral; generales, al alivio de los síntomas, para lo cual se
otros organismos no piógenos, como Mycobacterium utilizarán analgési- cos y antipiréticos del grupo
tuberculosis y Cryptococcus neofromans, causan de acetaminofén, y a prevenir y tratar las
cuadros de meningitis que se confunden con las de complicaciones.
tipo viral. Otras infecciones bacterianas intracranea-
les situadas en la proximidad de las meninges, como
las otitis, mastoiditis, osteomielitis vertebral y el abs-
ceso cerebral, son capaces de confundirse con este
ENCEFALITIS
cuadro.
Entre las causas no bacterianas hay que tener en Bajo la denominación de encefalitis y atendiendo al
cuenta que ciertas sustancias y fármacos pueden pro- exacto significado del vocablo, se agrupan todas las
ducir reacciones meníngeas estériles, como sucede inflamaciones agudas o subagudas que pueden so-
brevenir en el cerebro. Pero este concepto llevaría a
con el trimetoprim-sulfametoxazol, algunos AINE
incluir dentro del marco de la encefalitis, procesos
y los inmunosupresores; a ello se suman algunas
tan variados y numerosos como un traumatismo
afecciones tóxicas, enfermedades de índole vascu- cra- neal (encefalitis traumática), una localización
lar y tumores situados en la proximidad de los ven- cere- bral tromboembólica producida por cualquier
trículos cerebrales. El LCR ayudará en estos casos sepsis
de manera precisa a establecer el diagnóstico de una (encefalitis supurada localizada) y hasta una he-
reacción meníngea de carácter aséptico. morragia intracraneal (encefalitis hemorrágica).
Evolución y pronóstico Además, habría que incluir las localizaciones ce-
La recuperación plena de esta afección suele ocurrir rebrales de la sífilis, la tuberculosis, ciertos parási-
al cabo de 1 o 2 semanas de su inicio, aunque algu- tos, etc., todo lo cual haría demasiado extensos e
nos pacientes presentan durante meses cefalea, as- imprecisos los límites de la encefalitis.
tenia y fatiga. Por otra parte, las circunstancias clínicas en las
El pronóstico depende del agente causal. La ma- que se presentan manifestaciones cerebrales son
yor parte de los virus implicados en la etiología de tam- bién tan frecuentes y numerosas, que no es
lógico considerarlas todas como encefalitis, ya que
habría que plantear este diagnóstico ante cualquier
trastorno

373
metabólico, vascular, tóxico, etc. Por lo tanto, sólo Encefalitis secundarias. Son consecutivas a
se conceptúan como tal las inflamaciones cerebra- reac- ciones de hipersensibilidad y se
les de naturaleza infecciosa. corresponden con los cuadros de encefalitis
Los procesos inflamatorios de origen infeccioso pasvacunal, posinfecciosa y posexantemática (ver
no se limitan a la corteza cerebral, sino que a veces capítulo de “Enfermedades desmielinizantes”).
invaden la sustancia blanca, núcleos grises basales, La lesión anatómica encefálica se limita a:
tronco cerebral, e incluso la médula espinal (las lla- 1. La sustancia blanca. Se produce un verdadero
madas encefalomielitis). Del mismo modo se pro- cuadro de desmielinización, como ocurre en la
pagan a las meninges y entonces reciben la encefalitis por vacunación y exantemas.
denominación de meningoencefalitis. Estos hallaz- 2. La sustancia gris. Están la encefalitis letárgica
gos han servido de base al criterio ya enunciado de y la de tipo B.
denominar a dichos procesos como meningoencefa- 3. Ambas sustancias. Se lesionan a la vez la cor-
litis con predominio encefálico. teza cerebral, los núcleos grises basales y la
Como también se adelantó, por razones didácticas sustancia blanca; se incluye la encefalitis ne-
se ha tratado de resumir para el estudio de la encefa- crosante y algunas panencefalitis.
litis aquellas enfermedades en que la afectación del
cerebro es un hecho, si no aislado, por lo menos pre- Fisiopatología y formas clínicas
ponderante en el cuadro lesional meningoencefáli- Sin duda alguna el cerebro es el órgano que más
co, con cierta autonomía clínica. funciones realiza; por consiguiente, las manifesta-
ciones clínicas resultantes de su inflamación han de
Anatomía patológica ser tan variadas como sus funciones, y dependerán
Las lesiones anatomopatológicas varían de locali- de los centros o vías que el proceso patológico
zación según el agente causal y están constituidas haya involucrado. Por otra parte, la correlación
por focos de infiltración celular perivascular, peque- anatomo- clínica en las encefalitis ha sido
ños focos hemorrágicos, reacción hiperplásica de la precisamente uno de los métodos de investigación
neuroglia, trastornos degenerativos de las células que más ha aporta- do al estudio de la fisiología del
nerviosas (con poca o mucha degeneración de los cerebro.
ciclindroejes) y desmielinización de las fibras de la Los focos múltiples en el encéfalo son los res-
sustancia blanca.
ponsables de la dispersión de los síntomas (trastor-
Desde el punto de vista anatomopatológico, se
nos corticales, síntomas subtalámicos, bulbares,
distinguen las encefalitis primarias o primitivas y
etc.) y la toma de la corteza de las convulsiones
las secundarias.
generali- zadas, catatonía y trastornos motores
Encefalitis primarias. Pueden ser:
limitados a un miembro o parte de él.
1. Plurifocales. Las lesiones predominan en el
tronco cerebral y en los núcleos grises de la El cuerpo estriado y los centros del locus niger
base, pero a veces se extienden a la corteza y a alterados se manifiestan por temblor, rigidez, movi-
la sustancia blanca. Comprenden la encefalitis mientos coreicos o atetósicos, mioclonías, etc., fre-
letárgica epidémica y las formas altas de cuentes en la fase aguda y, sobre todo, como
poliomielitis. secuelas de las encefalitis. Cuando las lesiones
2. Difusas. Las lesiones se generalizan en todo el afectan el ist- mo del encéfalo, la toma de núcleos
cerebro y adoptan distintas variantes. de los nervios craneales allí existentes produce
a) Lesiones predominantemente corticales, que parálisis oculares y trastornos pupilares, así como
se presentan en la encefalitis japonesa, de parálisis facial.
San Luis y equina. En el tálamo se afecta la sensibilidad general,
b) Lesiones predominantemente corticobasales por lo que se producen crisis de hemialgias.
con tendencia a la necrosis, como en las en- También sus lesiones contribuyen a los trastornos
cefalitis herpéticas y necrosantes. de la moti- lidad mímica.
c) Lesiones con predominio axial, como en la En el subtálamo y las paredes del III ventrículo,
leucoencefalitis esclerosante subaguda y zona de las más afectadas por las encefalitis, se le-
otras formas de panencefalitis. sionan los centros vegetativos aquí situados, con
los consiguientes trastornos del sueño (letargia,
inver- sión del ritmo del sueño, crisis de
narcolepsia, etc.),
374
así como trastornos vasomotores y de las glándulas te tras la generalización de la vacuna contra esta
sudoríparas y sebáceas. A veces se altera la regula- enfermedad.
ción térmica y hasta se presentan signos de diabetes
insípida. Cuadro clínico
Las lesiones del bulbo son las responsables de la La PES (encefalitis de cuerpos de inclusión,
salivación, del hipo y de los trastornos respiratorios encefa- litis de Dawson) se presenta en niños o
(crisis de disnea). adolescen- tes. Su comienzo es insidioso y se
Como expresión de la repercusión sobre la fun- expresa por lo general por trastornos
ción cerebral global, se presentan delirio, trastornos psicointelectuales con una merma del rendimiento
psicóticos, y aun convulsiones y letargia.
escolar; la demencia es casi siempre su
Recientemente se han descrito en el hombre va-
manifestación inicial. Evolutivamente se encuentra
rias infecciones virales del SNC que, por su largo
incoordinación, ataxia, contracciones
período de incubación, han sido denominadas en-
mioclónicas y otras manifestaciones de tipo extra-
fermedades por virus “lentos”. Estas afecciones tie-
piramidal y piramidal (déficit motor). Luego hay
nen como rasgos comunes un largo tiempo de
latencia, evolución prolongada una vez iniciados los hipertonía con desaparición de la hipercinesia, ami-
síntomas, localización de las lesiones en un órgano mia, debilidad grave e intensa rigidez que conduce
y limitación de la infección a una sola especie de al enfermo a la postración y al encamamiento con
huésped. existencia vegetativa, diaforesis profusa, consunción
Entre las enfermedades producidas por virus “len- e infecciones sobreañadidas que lo llevan a la muerte.
tos” se incluyen la panencefalitis esclerosante Patogenia
subaguda y la leucoencefalopatía multifocal progre- La presencia de cuerpos de inclusión hizo
siva. sospechar que el virus del herpes simple podría ser
El nombre de infección lenta se utilizó por pri- el agente causal, pero distintos estudios indican al
mera vez para describir un grupo de enfermedades virus del sarampión como el responsable de la
infecciosas de las ovejas, de las cuales dos (scrapie afección. La tinción del tejido cerebral con
y visna) tenían manifestaciones de lesión del SNC y anticuerpos fluores- centes demuestra antígenos del
se caracterizaban por un período de latencia de 1 a 4 virus del sarampión en las inclusiones
años después de inoculado el animal con tejido de intranucleares e intracitoplasmá- ticas; asimismo,
oveja infectada. Desde el punto de vista clínico, se han encontrado altos niveles séricos de
scrapie se caracteriza por ataxia, y visna, por paráli- anticuerpos contra el virus del sarampión.
sis progresiva, y desde el anatomopatológico, en la Clínicamente la PES no guarda relación inmedia- ta
primera no existe la inflamación y desmielinización con el sarampión, pero se la considera como una
que presenta visna y sólo se halla proliferación in- respuesta tardía del SNC a la infección viral; es po-
tensa de astrocitos y degeneración neuronal con for- sible que se produzca un estado de portador viral en
mación de vacuolas. Hasta el momento, el agente el sistema nervioso que sirva de estímulo para con-
productor de scrapie no posee las características pro- tinuar elaborando antígeno viral intracelular.
pias de los virus; no así el de visna, que se describe
Diagnóstico
como el tipo viral.
El diagnóstico de la PES se basa en la
Panencefalitis esclerosante demostración en el LCR y suero de una elevación
del título de anticuerpos contra el virus del
subaguda sarampión. El LCR es acelular, con una
concentración de proteínas nor- mal o ligeramente
elevada e incremento de la tasa de IgG superior al
Concepto 15 % del contenido proteico to- tal, de forma
La panencefalitis esclerosante subaguda (PES) es una característica con bandas oligoclonales. Los
entidad poco frecuente producida por el virus del estudios de neuroimagen son normales en las fases
sarampión. Su incidencia ha disminuido notablemen- iniciales de la enfermedad, pero a medida que esta
progresa, se puede encontrar atrofia encefálica,
dilatación ventricular y cambios en la sustancia
blanca.
375
Tratamiento
No existe tratamiento eficaz. Se han probado diver-
Enfermedad producida
sos antivíricos, pero los resultados no han sido alen- por priones
tadores.
Son enfermedades degenerativas del SNC que tie-
nen un período de incubación prolongado, de
Leucoencefalopatía varios años y un curso progresivo
invariablemente fatal. Por el momento se
multifocal progresiva desconoce el agente etiológico, se sabe que no se
La leucoencefalopatía multifocal progresiva (LMP) trata de virus convencionales y parecen estar
es una afección rara, que fue descrita en 1958. Se compuestos exclusivamente por una proteína.
presenta en pacientes con linfomas, leucemias, sar- El nombre prion se basa en la noción de una pro-
coidosis o carcinomatosis. Afecta a los adultos de teína infectante y el elemento crucial en la patogé-
ambos sexos, tiene una duración de 3 a 4 meses a nesis molecular es el gen PrP, que se localiza en el
partir de los síntomas iniciales y termina con la muer- brazo corto del cromosoma 20 humano y su
te del enfermo. Desde el punto de vista clínico es produc- to es la proteína PrP.
común la hemiplejía, hemianopsia, afasia o disartria Se ha postulado la hipótesis de que cuando la
y alteraciones mentales orgánicas. Puede presentar- PrP infecta a un individuo susceptible, se replica
se una mielitis transversa completa o incompleta. por medio de la incorporación de la PrP normal en
los nuevos agentes agregados, proceso similar a la
cris- talización.
Patogenia Dentro de estas neurodegeneraciones trasmisibles,
La infección afecta a los oligodendrocitos, responsa- también denominadas encefalopatías espongiformes
bles de la mielinización; el resultado es la aparición por su peculiar apariencia anatomopatológica, exis-
de múltiples focos de desmielinización distribuidos ten cuatro entidades que afectan al hombre:
por la sustancia blanca de los hemisferios cerebra- a) El kuru.
les, el tronco cerebral y el cerebelo. b) La enfermedad de Creutzfeldt-Jakob.
c) El síndrome de Gerstman-Sträussler-
Diagnóstico Scheinker. d) El insomnio familiar fatal.
La LMP debe sospecharse en pacientes inmunode- Se hará referencia, por el interés que ofrece para
primidos con manifestaciones focales progresivas y el clínico, a dos de estas enfermedades: el kuru y la
alteración mental. enfermedad de Creutzfeldt-Jakob.
El LCR es normal; en la TAC se observan múlti-
ples áreas de bajo índice de atenuación en la sustan-
Kuru
cia blanca. La RMN es superior para la visualización El kuru afectaba a muchos niños y adolescentes de
de estas lesiones, que aparecen hiperintensas, y el la tribu Fore de Papúa-Nueva Guinea hace más de
edema cerebral es escaso. 30 años, y las mujeres presentaban la enfermedad
El diagnóstico es anatomopatológico, mediante con una frecuencia superior a los varones.
una biopsia cerebral. Comienza con trastornos en la coordinación, que
a veces son tan ligeros, que sólo lo percibe el
Tratamiento propio paciente; los enfermos presentan diversos
trastor- nos de los movimientos, tales como
No existe tratamiento, a pesar de diversos intentos anormalidades cerebelosas, rigidez de las
con antivíricos. Recientemente se han comunicado extremidades y clonus; en ocasiones hay atetosis y
algunos casos como primera manifestación del movimientos coreiformes y el paciente muestra una
SIDA, en que la enfermedad ha regresado bajo tra- respuesta excesiva al so- bresalto; hay labilidad
tamiento con zidovudina. emocional, con crisis patoló- gicas de risa (kuru
significa alegre o muerte en carcajadas); es
notable la ausencia de demencia.
376
La enfermedad se diagnostica por los hallazgos mantiene en una etapa experimental. Las técnicas
físicos; no se ha detectado ninguna alteración analí- de neuroimagen seriadas ponen de manifiesto en
tica característica y no existe tratamiento. al- gunos pacientes una progresiva atrofia de
Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob estructu- ras cerebrales, que ocasionalmente
predomina en la fosa posterior.
Concepto En el EEG se observa al principio una
Es una enfermedad progresiva inevitablemente mor- lentificación y falta de sincronización de la
tal, producida, al parecer, por la acción de priones actividad eléctrica cerebral, y en fases más
sobre el SNC y caracterizada por demencia progre- avanzadas aparecen elemen- tos de brotes agudos.
siva y crisis mioclónicas, que afecta a adultos de La confirmación diagnóstica la proporciona el
edad madura. examen neuropatológico. La tríada lesional caracte-
rística con pérdida neuronal, gliosis y cambios
Etiología y patogenia espongióticos, se distribuye por las diferentes áreas
Se desconocen la etiología y la patogenia, aunque de la corteza cerebral, y también pueden verse afec-
se ha demostrado que en ella ocurre la acumulación tados los ganglios basales, el tronco cerebral y el
cerebelo.
exagerada, de una forma anormal, de una proteína
(PrP) codificada por un gen del cromosoma 20, que Tratamiento
se comporta como una neurotoxina endógena.
Actualmente se postula que la entrada del prion No se dispone en la actualidad de un tratamiento
eficaz para la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob,
dentro del genoma neuronal pudiera interrumpir la
que es mortal en todos los pacientes, aunque se han
síntesis de la proteína normal, e inducir su propia
des- crito algunos casos de larga duración.
replicación, pero para padecer la enfermedad sería
necesario tanto la presencia del prion como del ade- Encefalitis letárgica
cuado sustrato genómico en el huésped.
Entre todas las variedades de encefalitis, es la letár-
Cuadro clínico gica de Von Economo la que habitualmente presen-
ta el cuadro clínico más característico, y la que se
La demencia muchas veces es la primera señal de la utilizará como modelo para la descripción de la
enfermedad, y suele manifestarse por descuido per- enfermedad, aunque ya se hizo referencia a otros
sonal, apatía o irritabilidad; algunos pacientes se tipos.
quejan de fatiga fácil, somnolencia, insomnio u otros Esta afección, descrita por primera vez en 1917
trastornos del sueño. por Von Economo en Viena, fue siempre
Son posibles otras anormalidades de las funcio- reconocida como de naturaleza epidémica, aunque
nes corticales altas, como afasia, apraxia, dislexia, la inciden- cia de estas epidemias ha sido muy
disgrafia, agnosia, desorientación de derecha-iz- pobre en los úl- timos tiempos, ya que sólo se han
quierda y signos piramidales y extrapiramidales. Son observado algunos casos esporádicos. No tenemos
frecuentes los trastornos oculares, incluyendo defec- noticias de la exis- tencia en Cuba de la forma
tos del campo visual, diplopia o visión borrosa y epidémica de la enfer- medad, pero sí se
agnosia visual. presentan, aunque con poca frecuencia, formas
La muerte ocurre como consecuencia de infec- esporádicas cuyo cuadro clínico reproduce la
ciones intercurrentes, tras una duración media de 7 a descripción que se da en la encefalitis epidémica.
9 meses.
Cuadro clínico
Diagnóstico Casi siempre comienza en forma brusca, con
El diagnóstico se basa en las manifestaciones clíni- fiebre, escalofríos y cefalea; el paciente cae
cas, puesto que todos los exámenes complementa- rápidamente en una somnolencia más o menos
rios son normales o revelan anomalías inespecíficas. profunda, de la que sólo sale de forma parcial
La búsqueda de marcadores de la PrP en el LCR se bostezando de mane- ra repetida, mediante fuertes
excitaciones, como sa- cudidas y pellizcos.
Apenas éstas cesan, vuelve a
377
caer en un sopor y se mantiene así varios días, du- El pronóstico de la encefalitis letárgica es varia-
rante los cuales hay incontinencia de orina y a veces ble. Las formas que presentan fiebre elevada e in-
de materias fecales. tensa somnolencia desde el comienzo,
El enfermo respira en forma pausada, lenta y pro- generalmente evolucionan hacia la muerte.
funda; no tiene el aspecto del comatoso, sino de per- Asimismo sucede en las formas mioclónicas
sona dormida. Al examen físico sólo se ha podido generalizadas. El pronósti- co también varía según
poner de manifiesto una anisocoria, debilidad de los el grado y tipo de secuela establecida.
reflejos osteotendinosos y cierto grado de rigidez de La causa influye en el pronóstico: es muy malo
la nuca. Poco a poco el paciente sale cada vez más en las formas que complican al sarampión y benig-
de su letargo y pasa a una fase de obnubilación de no en las que siguen a la varicela.
muchas horas; luego, a otra más corta de somnolen-
cia, y finalmente recobra la conciencia. Tratamiento
En la variedad epidémica se descubre, al lado de No existe tratamiento específico de la encefalitis
la forma letárgica, una hipercinética en la que suce- le- tárgica. Empíricamente se recomiendan
de todo lo contrario: el paciente se muestra agitado, antibióticos de amplio espectro: tetraciclina, 2 g
locuaz, con trastornos del lenguaje, movimientos diarios por vía oral o parenteral y corticosteroides,
coreicos, atetósicos, mioclonías, temblor, dolores 40 o 60 mg dia- rios, además del tratamiento
neurálgicos, etc. Esta forma parece más pródiga en sintomático.
la producción de secuelas. En cuanto a las demás encefalitis, el tratamiento
También se describe como frecuente la forma se ajustará a cada causa en particular.
amiostaticoacinética, en la que se presenta un sín-
drome de Parkinson agudo, que evoluciona casi
directamente hacia el parkinsonismo crónico posen-
cefalítico.
ABSCESO CEREBRAL
Exámenes complementarios Prácticamente La colonización de gérmenes piógenos en la cavi-
sólo tiene valor el estudio del LCR, en el que por lo dad craneal suele ocasionar la formación de colec-
general se encuentra aumento de la presión, ciones purulentas más o menos circunscritas, y que
hiperalbuminorraquia con aparición de glo- bulinas, según su localización pueden ser: extradurales,
subdurales, subaracnoideas e intracerebrales.
hiperglucorraquia y pleocitosis linfocítica. En
El absceso extradural es secundario a osteomie-
ocasiones las cifras de proteínas son normales o
litis de los huesos del cráneo, generalmente
están poco elevadas y contrastan con la pleocitosis
postrau- mática o causada por infecciones de los
linfocítica, lo que constituye la disociación citoal-
senos y cavidades de la pared craneal. La
bumonoidea de Eskuschem. infección pasa a través del hueso, pero queda
detenida por la dura- madre, lo que origina la
Secuelas
acumulación de pus entre ésta y el hueso.
Ya se señaló que la forma amiostaticoacinética y la En el absceso subdural, la infección ha penetra-
hipercinética, dan lugar más a menudo a secuelas do la duramadre y el pus se encuentra entre esta
crónicas, como el síndrome parkinsoniano, que se membrana y la superficie cerebral.
presenta con más frecuencia que otras. Las lesiones El absceso subaracnoideo es raro y el pus está
definitivas de cualquiera de los núcleos de la base limitado al espacio subaracnoideo, donde se espar-
del cerebro o de la propia corteza, ocasionarán se- ce sobre la superficie del cerebro.
cuelas en relación con la formación dañada. En el absceso intracraneal o cerebral, la colec-
Las encefalitis a veces inaparentes o de poca im- ción supurada se establece en el seno de la masa
portancia, constituyen el factor etiológico más co- encefálica. Es a éste al que se hace referencia a
mún de los síndromes talámicos, subtalámicos, de con- tinuación.
la sustancia reticular, etc.
Otras secuelas de la encefalitis son glucosuria, Etiología
obesidad, lipodistrofia, etc., por destrucción de los
Las causas del absceso cerebral, en un orden
centros nerviosos correspondientes.
aproxi- mado de frecuencia, son:
378
1. Infecciones del oído, mastoides y senos peri- El desarrollo del absceso cerebral pasa por tres
nasales. estadios:
2. Septicemias. 1. Encefalitis aguda circunscrita, que se produce
3. Metástasis de supuraciones pulmonares. tras la colonización de los gérmenes sin for-
4. Fracturas del cráneo. mación visible de pus.
2. Aparición de pus, pero sin delimitación del te-
Las infecciones del oído medio y de la mastoides jido que rodea al absceso.
son, como causas de abscesos cerebrales, de 4 a 10 3. Formación de la pared definitiva, que
veces más frecuentes que las de los senos perina- encapsula al absceso. Los de origen ótico
sales. están situados usualmente en la parte media
Entre las septicemias hay que excluir la endocar- o posterior del lóbulo temporal, o en el
ditis subaguda, pues en estos casos el organismo in- cerebelo; la primera localización es dos veces
fectante tiene poca virulencia, y el embolismo séptico más frecuente que la segunda.
provoca más daño de la pared vascular y formacio-
nes aneurismáticas que abscesos. De forma excepcional, esta puerta de entrada
con- diciona la producción de abscesos en la
Cuando se trata de un absceso cerebral secunda-
protuberan- cia y en los lóbulos frontal y parietal.
rio a una infección localizada, el tórax es usualmen-
En los casos de otitis, el cerebro puede infectarse
te el foco de asiento de ésta.
como resultado de una trombosis séptica del seno
Muchas veces la infección primaria es una bron- lateral u osteo- mielitis de la pared timpánica, así
quiectasia, un empiema crónico o un absceso pul- como a través de los espacios adventicios de los
monar. vasos perforantes. Los abscesos que se deben a una
Las fracturas del cráneo causan abscesos cuando sinusitis ocupan generalmente la parte anterior de
el traumatismo establece una libre comunicación en- los lóbulos fronta- les, mientras que los
tre la superficie del cuero cabelludo y el cerebro, hematógenos tienen cualquier localización, aunque
especialmente si fragmentos de hueso y cuerpos ex- casi siempre son supratento-
traños penetran en este último. riales.
Entre los gérmenes capaces de producir un abs- Desde el punto de vista microscópico, un
ceso cerebral se hallan: Estreptococos, Staphylococ- absceso cerebral consta de una capa interna de pus,
cus aureus, enterobacterias (Proteus, Enterobacter, una me- dia de tejido de granulación constituida
Serratia, etc.) y anaerobios del grupo bacteroides. por vasos de neoformación y tejido hiperplásico, y
Las infecciones mixtas de aerobios y anaerobios son más afuera una capa de glía reaccional, celular en
comunes. Con menor frecuencia se encuentran abs- los primeros estadios, y luego fibrosa. Abundan las
cesos tuberculosos, micóticos o parasitarios. células gra- sas, los plasmocitos y los leucocitos
En algunas ocasiones los estudios microbiológi- polimorfonu- cleares, principalmente en la capa
cos no han podido hallar los gérmenes causales del media. En las meninges adyacentes existe una
absceso cerebral, que en algún momento deben ha- reacción inflama- toria.
ber estado presentes; ello constituye lo que ciertos
autores llaman abscesos “estériles”, aunque hoy son Cuadro clínico
cada vez menos los casos de cultivos estériles debi- El cuadro clínico tiene variaciones en su comienzo,
dos al tratamiento antimicrobiano o a una inadecua- según la causa que origine el absceso. Cuando es con-
da manipulación y cultivo de las muestras. secutivo a una fractura del cráneo, usualmente se
desarrolla de manera rápida después del traumatis-
Anatomía patológica
mo, aunque si un cuerpo extraño penetra en el cere-
El absceso cerebral, usualmente único, es a veces bro, puede haber un período de latencia. Sin
múltiple. Su tamaño oscila entre unos pocos milí- embargo, estos casos ofrecen poca dificultad diag-
metros (abscesos miliares) y varios centímetros de nóstica.
diámetro; a veces ocupa todo un lóbulo. Se localiza La anamnesis tiene particular importancia cuan-
con más frecuencia en el hemisferio izquierdo. do el absceso es secundario a una otitis media o
mastoiditis. Algunos de estos casos comienzan en
379
forma aguda o subaguda. Después de la exacerba- ciones estas que en ocasiones confunden la locali-
ción de una otitis media persistente, de una supre- zación de la colección séptica cerebral.
sión temporal de la otorrea, o de una operación de la Síntomas focales neurológicos. Varían en
mastoides, el paciente presenta rápidamente cefa- relación con la localización del absceso y no
lea, vómitos y delirio. En ocasiones existe un inter- difieren de los que se encuentran en los tumores
valo latente que dura meses antes de que aparezcan intracraneales. En ocasiones faltan totalmente o
los signos del absceso, y durante el cual quizás el son muy poco mani- fiestos, lo cual se debe a la
enfermo aqueje algunos síntomas que deben localización de la lesión en las llamadas zonas
alertarnos, tales como cefalea, pérdida de peso y mudas cerebrales (abscesos muy profundos,
apetito, constipación, pirexia ocasional y cambios algunos de localización frontal, pa- rietal o
en el carácter, que consisten en depresión e irritabi- temporal, del hemisferio no dominante).
lidad.
Los abscesos de origen hematógeno pueden de-
Exámenes complementarios
sarrollarse en forma lenta e insidiosa, y en tal caso Hemograma. Los estudios hematológicos revelan
ser muchas veces indistinguibles clínicamente de un habitualmente leucocitosis con desviación hacia la
tumor intracraneal, antes de que el foco primario sea izquierda.
descubierto. Eritrosedimentación. Está acelerada.
El cuadro clínico de los abscesos cerebrales com- Examen de LCR. La punción lumbar no es reco-
prende tres categorías de síntomas: generales de in- mendable por el riesgo de herniación central cuan-
do hay manifestaciones importantes de
fección, de hipertensión intracraneal y focales
hipertensión intracraneal y por la inespecificidad
neurológicos.
de los hallaz- gos. No obstante, en muchas
Síntomas generales de infección. La severidad de
ocasiones se realiza ante la sospecha de una
estos síntomas infecciosos guarda proporción con
meningitis, y para ello de- ben extremarse los
la agudeza del absceso. En los casos agudos aparece cuidados en su técnica.
fiebre irregular, y en los crónicos, la temperatura sólo Cuando el absceso está encapsulado, el líquido
está ligeramente elevada o es normal. Las manifes- es claro. Las alteraciones más constantes consisten
taciones de orden general comprenden astenia, ano- en pleocitosis moderada (más de 100 células /
rexia, pérdida de peso, constipación, etc. mm3), inicialmente con predominio de
Síntomas de hipertensión intracraneal. La cefa- polimorfonucleares, pero si la cápsula que cubre al
lea constituye el síntoma inicial más frecuente y absceso se ha com- pletado y éste queda aislado,
aparece de manera brusca o lenta e insidiosa; cuan- comienza a disminuir esta estirpe celular y aparece
do se trata de un absceso crónico, adopta la forma una franca pleocitosis linfocítica. Hay aumento de
paroxística, se incrementa con los esfuerzos y ejer- las proteínas locales con reacciones globulínicas
cicios, y presenta todas las características de la ce- positivas. La glucosa y los cloruros no se alteran.
falea causada por un aumento de la presión El examen bacteriológico del líquido es negati-
intracraneal. Por lo común es también muy severa vo. Sólo es posible aislar el microrganismo cuando
en los casos agudos. La cefalea se localiza del mis- el foco séptico se ha abierto en las meninges y hay
mo lado del absceso, o es generalizada. El papilede- una meningitis concomitante. En esta condición pre-
ma, signo tardío que a veces falta, usualmente tiene dominan los polimorfonucleares y hay disminución
mayor intensidad en el lado de la lesión. de la glucosa y los cloruros.
La bradicardia, más común en los abscesos que Ecoencefalograma. Puede demostrar la presen-
en los tumores, no es constante y cuando se presen- cia de una neoformación en uno de los hemisferios.
ta, indica casi siempre un aumento rápido de la se- Radiografía simple de cráneo. En ocasiones este
veridad de la lesión. estudio ayuda a realizar el diagnóstico presuntivo
En los casos graves aparece delirio, somnolencia, del absceso cerebral, al mostrar algunos signos de
estupor y coma. hipertensión intracraneal o, con escasa frecuencia,
calcificaciones en la cápsula del absceso. También
La hipertensión intracraneal es causa de parálisis
aporta datos en cuanto al origen traumático del abs-
del III y IV pares, y sobre todo del VI, manifesta-
ceso, si éste fuera el caso, por el hallazgo de fractu-
ras o desplazamientos óseos.
380
Gammagrafía cerebral. Los estudios por medios Cuando el absceso está localizado en el cerebelo,
isotópicos cerebrales resultan un proceder seguro no resulta fácil diferenciarlo de una laberintitis agu-
para la localización de manera gráfica de la zona de da; sin embargo, en el absceso laberíntico predomi-
la lesión. na el vértigo, y los trastornos de la marcha están
TAC. Es el método por excelencia y hasta tal pun- íntimamente ligados a él; mientras que en el
to ha sido importante en el manejo de los abscesos, cerebeloso el síntoma llamativo lo constituye la ce-
que se considera el factor aislado que más ha contri- falea, y los trastornos de la marcha, que son cons-
buido a disminuir su mortalidad. Posibilita un diag- tantes, no guardan relación con las crisis de vértigo,
nóstico más temprano y permite determinar la que por otra parte no suelen existir.
transición de la fase de encefalitis circunscrita a la Por último, la laberintitis se acompaña de trastor-
de absceso encapsulado, valorar el espesor de la cáp- nos auditivos, mientras que una hipotonía muscular
sula, el tamaño de la lesión y la distorsión de los evidente indica lesión cerebelosa.
ventrículos, y controlar el período posoperatorio y
la evolución terapéutica.
Pronóstico y complicaciones
RMN. Es más sensible para detectar lesiones pe- La mortalidad, antes muy alta (cerca del 50 %), se
queñas en fase de encefalitis o las localizadas en fosa ha reducido a cifras del 5 al 10 %. A ello han
posterior; su mayor lentitud y su poca disponibili- contri- buido diversos factores, entre otros la
dad en la mayoría de los servicios, ha hecho que se moderna qui- mioterapia antimicrobiana y la mejora
utilice cuando haya dudas acerca de la naturaleza de de las técnicas radiológicas y neuroquirúrgicas.
la lesión. Los principales factores pronósticos son: el esta-
La TAC y la RMN han desplazado a otros méto- do neurológico al ingreso, la localización y tamaño
dos diagnósticos, como la angiografía cerebral y la del absceso, y la naturaleza de la enfermedad pre-
ventriculografía, y en menor escala a la gammagra- existente.
fía cerebral en el diagnóstico y ubicación topográfi- Una de las complicaciones más graves y de pro-
ca del absceso cerebral. nóstico desfavorable, la constituye la irrupción del
Están indicados otros exámenes: hemocultivos, absceso en el sistema ventricular.
como en todo cuadro de sepsis, y estudios radiológi- Otra complicación que ensombrece el pronóstico
cos de los senos perinasales, mastoideos, tórax, etc., es la trombosis de las venas cerebrales,
en la búsqueda del foco séptico primario. especialmente la del seno cavernoso, así como la
encefalitis dise- minada y las meningitis.
Diagnóstico
En el absceso cerebral generalmente existe una evi- Tratamiento
dencia de infección previa, que permite sospechar El tratamiento del absceso cerebral se escapa de las
el diagnóstico; cuando no ocurre así, con frecuencia posibilidades terapéuticas del internista, pues una
se confunde con un tumor cerebral. vez pasada la fase de encefalitis difusa aguda y
Si se detecta un foco infeccioso, hay que distin- localiza- da, o encapsulada la colección, la
guir el absceso de otras complicaciones infecciosas intervención del neurocirujano se impone.
intracraneales. La meningitis puede coexistir con el Hoy en día se acepta que el tratamiento médico
absceso, pero se identifica por la presencia de sig- conservador quedaría restringido para las lesiones
nos de irritación meníngea (a veces presentes tam- precoces en fase de encefalitis difusa aguda (antes
bién en el absceso). La trombosis del seno lateral de la encapsulación) y en caso de abscesos múlti-
causa pocas alteraciones cerebrales, aunque la con- ples o localizados en áreas de difícil abordaje qui-
gestión resultante ocasiona a veces un papiledema rúrgico.
discreto, más marcado del lado afectado, y ligeros Desde el punto de vista quirúrgico, en los
signos de deficiencia motora en la parte opuesta. últimos años hay tendencia hacia un tratamiento
Tiene valor la maniobra de Queckenstedt, ya que no más con- servador y se prefiere la punción-
hay aumento de la presión al comprimir las yugula- aspiración a la resección del absceso, ya que desde
res del lado afectado. la aparición de la TAC, la punción-aspiración
ha aumentado
381
notablemente su eficacia, pues permite incluso eva- Una vez obtenido el pus y el estudio
cuar abscesos profundos por procedimientos de ci- bacteriológico con antibiograma, la respuesta del
rugía estereotáxica con guía tomográfica, lo que enfermo al trata- miento de inicio determinará la
causa menor daño cerebral y, por tanto, menos se- terapéutica antibió- tica que debe seguirse.
cuelas. Aun así, la elección de uno de estos métodos Debe tratarse el foco primario existente, siempre
depende de la localización, tamaño del absceso y la que se le conozca.
facilidad de abordaje. La mejoría radiológica suele ser posterior a la
Ante un absceso cerebral no traumático causado clí- nica y a menudo es necesario que transcurran
por un microrganismo desconocido, la combinación varias semanas (6 a 8) de tratamiento antibiótico,
recomendada actualmente es la de una cefalosporina antes de poder constatar una disminución del
de tercera generación, cefotaxima, 200 mg/kg/día tamaño del abs- ceso en la TAC. Si se decide
EV, en 4 dosis, o ceftriazona (junto con metronida- manejar médicamente al enfermo, debe llevarse a
zol), 30 mg/kg/día EV, en 3 dosis. cabo un estrecho segui- miento, tanto clínico como
radiológico, realizando al menos una TAC
semanal.
382
39
ENFERMEDADES
CEREBROVASCULARE
S
Concepto ellos es la hipertensión arterial (HTA), cuya
relación causa-efecto con las ECV está demostrada.
Se conocen con este nombre las afecciones que re-
La eliminación del hábito de fumar es una estra-
sultan de la pérdida funcional transitoria o perma-
tegia efectiva para disminuir la posibilidad de acci-
nente de una parte cualquiera del SNC ubicada en dente cerebrovascular isquémico o hemorrágico,
la cavidad craneal, generalmente de instalación sú- pues en los fumadores el riesgo de aterosclerosis es
bita, causada por la oclusión trombótica o embólica, ma- yor. La relación entre el hábito de fumar y las
o por la ruptura de una arteria encefálica (o en oca- ECV no se ha demostrado hasta ahora, como sí es
siones de una vena). el caso de su relación con las enfermedades
cardíacas, pero este hábito asociado a migraña, uso
Epidemiología de anticoncepti- vos orales, obesidad y
El desarrollo alcanzado por la especialidad en los sedentarismo, potencializa el riesgo de aquéllas.
últimos años ha demostrado la existencia de nuevos Los factores de riesgo se han calificado en
factores de riesgo para estas afecciones y se hace defini- dos y posibles (cuadro 39.1).
necesario conocerlos.
Las enfermedades cerebrovasculares (ECV) cons- CUADRO 39.1
tituyen la primera causa de ingreso por trastornos FACTORES DE RIESGO DE LAS ENFERMEDADES
CEREBROVASCULARES
neurológicos, con una incidencia anual global de
alrededor de 800 casos por cada 100 000 habitan- 1. Características individuales y del estilo de vida
tes; en los países desarrollados se calcula que hasta Definidos Posibles
un 5 % de la población de más de 60 años sufre de
Hábito de fumar. Anticonceptivos orales.
alguna forma esta afección. En Santiago de Cuba se Alcoholismo. Dieta.
egresan anualmente 2 400 pacientes con dicha enti- Drogas y fármacos. Personalidad.
dad. En la medida que se incrementa la expectativa Edad. Localización geográfica.
de vida, aumentan los riesgos y, por tanto, la preva- Sexo. Estación del año.
Raza. Mortalidad materna.
lencia. Cambios meteorológicos.
Todo esto, unido a los largos períodos de hospi- Sedentarismo.
talización, las secuelas que produce y gastos en la Factores socioeconómicos.
rehabilitación, así como pérdidas laborales por in- Dislipemias.
Factores familiares.
capacidad, hace que sea de las enfermedades más
costosas, pues afecta la economía de la medicina, 2. Enfermedades y marcadores biológicos de enferme-
de la familia y del individuo. Realmente, constitu- dades
yen un problema en ascenso las elevadas tasas de Definidos Posibles
mortalidad que se registran, tanto en el mundo como Hipertensión arterial (HTA). Hiperuricemia.
Enfermedades cardíacas. Hipotiroidismo.
en nuestro país.
• Arritmias. Hiperlipoproteinemia.
Se conoce que controlando los factores de riesgo, • Cardiopatía isquémica.
se logra reducir la incidencia, prevalencia y morta- • Otras cardiopatías.
lidad por estas enfermedades; el más signicativo de

383
(cont.) Todas estas modernas técnicas para el diagnósti-
co y tratamiento intervencionista se complementan
Ataque trasitorio de isquemia con la aplicación de nuevos productos medicamen-
cerebral (ATI).
tosos, aún experimentales, para tratar los infartos ce-
Hematócrito elevado.
Diabetes mellitus (DM). rebrales.
Firbrinógeno elevado.
Migraña y equivalentes migrañosos. Recuento anatómico de la circulación
3. Lesiones estructurales asintomáticas
cerebral
Detectadas en el examen Detectadas en explora-
El sistema nervioso se nutre de dos sistemas
físico ciones complementarias arteria- les fundamentales:
Soplo carotídeo. Oculopletismografía con a) Sistema carotídeo o anterior.
Embolia retiniana. tensión disminuida. b) Sistema vertebrobasilar o posterior.
Presión arterial distinta Flujometría alterada en en
ambos brazos. estudio Doppler. Ambos parten de los ramos supraórticos del ca-
Asincronía de los pulsos Ultrasonido de carótida yado. El sistema anterior o carotídeo es responsable
carotídeos. con estrechez.
TAC o RMN con:
de irrigar los lóbulos frontales, parietales y la cara
externa de los temporales y quiasma óptico, retina, pu-
• Enfermedad cerebrovascu-
lar silente. tamen, núcleo caudado, brazo anterior de la cápsula
• Aneurismas. interna y las cuatro quintas partes anteriores del
• Estenosis. cuer- po calloso.
• Malformación El sistema posterior o vertebrobasilar irriga el tá-
arteriovenosa. lamo, núcleo subtalámico, núcleo rojo, tallo cere-
bral, cerebelo, porción retrolenticular de la cápsula
interna, cara inferior de los lóbulos temporales y
Impacto de la tecnología los lóbulos occipitales.
En las últimas décadas se ha avanzado en el estudio Las necesidades de una zona del encéfalo que ha
de estas afecciones como consecuencia de un mejor quedado privada de su aporte sanguíneo, pueden
conocimiento de la anatomía y fisiología de la circu- ser suplidas por el desarrollo y la apertura de una
lación cerebral, por el desarrollo de muchas técni- circu- lación colateral anastomótica eficiente, que
cas de neuroimagen: angiografía encefálica, TAC, impide o reduce la muerte del tejido nervioso. El
RMN y gammagrafía cerebral con radioisótopos. circuito o polígono de Willis es el punto más
Todas ellas permiten identificar el tipo, la extensión importante de asiento de anastomosis arteriales.
y la localización de la lesión, así como diferenciar Entre la carótida interna y la externa se estable-
con facilidad otras enfermedades encefálicas con cen anastomosis importantes. Además, las anasto-
similitud clínica. Se han creado técnicas de ultraso- mosis que existen entre la arteria occipital y sus
nido Doppler con las que se identifican trastornos ramas meníngeas y la arteria cerebral posterior, en-
del flujo cerebral intra y extracraneal y se localizan lazan la circulación de la carótida con la vertebro-
topográficamente las lesiones en el árbol vascular, basilar.
así como otras de neurofisiología clínica que permi-
ten detectar zonas de sufrimiento neuronal aun an- Bases fisiológicas de la circulación
tes de producirse la lesión anatómica. Es decir, que y metabolismo cerebral
hay una nueva etapa diagnóstica en las afecciones. El cerebro, que tiene apenas el 2 % del peso del or-
Por otra parte, ha habido un desarrollo impetuoso de ganismo, consume un 20 % del gasto cardíaco.
nuevos procederes quirúrgicos para el tratamien- to, Esto es debido a que sus células son muy
tanto en la cirugía vascular (angioplastia, endar- especializadas y muy activas funcionalmente, pero
terectomía, derivación extracraneal-intracraneal y la no poseen re- servas energéticas, lo que hace que
esperanzadora modalidad denominada angioplastia requieran gran- des cantidades de energía que
transluminal percutánea), como en la cirugía intra- tienen que producir de forma constante a expensas
craneal por craneostomía o cirugía estereotáxica. del oxígeno y la glu- cosa de la sangre, por lo cual
necesitan de un árbol
384
vascular óptimo que garantice un flujo adecuado para • Barrera encefalomeníngea, entre el LCR y el
abastecer estos elementos y eliminar todos los pro- espacio intersticial cerebral.
ductos de desecho originados por su activo metabo- • Barrera hematomeníngea, entre la sangre y el
lismo. Se conoce que el flujo sanguíneo cerebral se LCR.
mantiene constante gracias a las regulaciones fisio-
lógicas que en distintas circunstancias se producen. Clasificación de las enfermedades
Esto puede ser modificado por la presión arterial y
la presión venosa encefálicas, la intracraneal, la vis-
cerebrovasculares
cosidad de la sangre, el radio de los vasos cerebrales Las ECV comprenden dos grandes grupos:
y la presión arterial media sistémica. 1. Enfermedad cerebrovascular isquémica.
Se ha podido demostrar que existe un grupo im- Es aquella que se produce como consecuencia de
portante de sustancias susceptibles de cambiar el flu- la oclusión de un vaso sanguíneo intracraneal por
jo sanguíneo cerebral, que al actuar modifican el trom- bosis o embolia, o ataque transitorio de
radio de los vasos cerebrales, incluso en regiones isquemia.
aisladas del encéfalo; de estas sustancias, la más an- 2. Enfermedad cerebrovascular hemorrágica. Es
tiguamente conocida es el CO2, que causa vasodila- la causada por la ruptura de un vaso intracerebral o
tación cerebral. En fecha más reciente se ha conocido en el espacio subaracnoideo, y comprende la
el papel del potasio, hidrógeno, calcio, prostaglan- hemorra- gia subaracnoidea, la
dina, óxido nítrico, factor relajante derivado del en- intraparenquimatosa y la in- traventricular
dotelio, factor contráctil derivado del endotelio o
primaria.
endotelina, glucosa, ácido láctico, neurotrasmisores
y otras muchas, capaces de provocar vasoconstric- Clasificación etiológica
ción o vasodilatación y que pueden ser liberadas por
daño en el endotelio vascular y las plaquetas, por I. Isquémicas.
hipoxia, cambios de pH o cualquier injuria cerebral. • Ataque transitorio de isquemia cerebral.
El flujo sanguíneo cerebral normal oscila entre 50 y • Trombosis cerebral.
100 ml/cada 100 g de masa encefálica/min, aun- • Infarto lacunar.
que esto es muy variable y suele afectarse de forma • Embolia cerebral.
importante sin dar manifestaciones; pero cuando dis- II. Hemorrágicas.
minuye a menos de 20 ml/100 g/min, comienzan a 1. Espontáneas.
producirse cambios fisiológicos en las neuronas con • Hemorragia subaracnoidea.
alteraciones funcionales que por lo común se recu- • Hemorragia cerebral o intraparenquima-
peran si se restituye el flujo, pero si disminuye por
tosa.
debajo de 10 ml/100 g/min (umbral de agotamiento
energético), tiene lugar daño estructural irreversible • Hemorragia intraventricular primaria.
de la neurona. • Hemorragia cerebromeníngea.
Existen mecanismos que protegen al encéfalo de 2. Traumáticas.
cambios fisiológicos bruscos, como la autorregula- • Hematoma subdural.
ción cerebral, que actúa ante variaciones de la presión • Hematoma epidural.
arterial (se modifica con presiones medias inferio-
Clasificación evolutiva
res a 60 mmHg y superiores a 160 mmHg), el cono-
cido reflejo isquémico y el reflejo de Cushing, que I. Ataque transitorio de isquemia cerebral.
provoca vasoconstricción periférica para mejorar flu- • Regresa completamente en menos de 24 h.
jos cerebrales ante una isquemia o aumento de la II. Defecto neurológico isquémico reversible.
presión intracraneal. Actúan, además, otras barreras • Déficit neurológico de más de 24 h y menos
protectoras, como son: de 3 semanas.
III. Infarto isquémico en evolución o progresión.
• Barrera hematoencefálica, entre los capilares y • Déficit neurológico que empeora, o apari-
el líquido intersticial. ción de nuevos síntomas.
IV. Infarto cerebral estable o completo.
• No hay progresión o modificación del cua-
dro clínico.
385
La clasificación evolutiva de las ECV isquémicas CUADRO 39.2
CAUSAS DE TROMBOSIS CEREBRAL
tiene valor pronóstico para el manejo del enfermo
en fase aguda, donde una acción oportuna suele mi- 1. Aterosclerosis (se agrava con):
nimizar el daño cerebral en las lesiones que progre- a. Hipertensión arterial.
san; pero puede deberse en cualquiera de sus formas b. Diabetes mellitus.
de presentación, tanto a lesiones embólicas como c. Hiperlipemia.
trombóticas, y es imprescindible determinar su cau- d. Hábito de fumar.
2. Arteritis.
sa, siempre que sea posible, para indicar un trata- a. Poliarteritis nudosa.
miento integral y hacer un seguimiento correcto del b. Arteritis temporal.
paciente. c. Arteritis reumática.
d. Lupus eritematoso diseminado.
e. Arteritis infecciosa.

TROMBOSIS 3. Otras causas.


a. Displasia fibromuscular.
b. Radiaciones.
CEREBRAL c. Disección carotídea.
d. Enfermedad de Moya-Moya.
e. Compresiones extrínsecas del vaso (tumores, osteofi-
Concepto tos, otros).
f. Infiltraciones de las paredes (neoplasias).
Se llama trombosis cerebral (TC) al cuadro neuro- g. Vasospasmo (crisis hipertensiva, hemorragia subarac-
lógico que se produce cuando ocurre la muerte de noidea, manipulación, etc.).
una zona determinada del encéfalo por falta del rie- 4. De causas no demostrables.
go sanguíneo necesario para la vida, consecuencia
de una obstrucción de la luz de la arteria nutricia La arteriosclerosis se desarrolla en todas las arte-
por un coágulo desarrollado en su interior de mane- rias cerebrales, pero la carótida interna a nivel del
ra lenta y gradual. cuello y la cerebral media en su bifurcación, resul-
tan las más afectadas. También las vertebrales y la
Etiopatogenia bifurcación del tronco basilar, son localizaciones fre-
cuentes de placas de ateroma y obstrucción. Igual-
La TC se produce sobre una lesión vascular previa,
mente, las arterias carótidas primitivas, subclavias,
que provoca adherencia de plaquetas y fibrina, en-
tronco arterial braquiocefálico y arterias vertebra-
tre las que quedan atrapados elementos formes de la
les, en su trayecto extracraneal son asiento de pla-
sangre y se desarrollan coágulos que, en la medida
cas de ateroma y oclusión trombótica.
que aumentan de tamaño, reducen la luz del vaso e
inducen grados variables de isquemia cerebral, has- No siempre que ocurre una oclusión arterial
ta ocluirlo totalmente y provocar el infarto cerebral. trom- bótica se presenta el cuadro clínico de la TC,
Son múltiples las causas que dan lugar a la forma- ya que en ocasiones el flujo sanguíneo que llega a
ción del coágulo (cuadro 39.2) a partir del daño en la zona isquémica por las arterias colaterales
el endotelio, pero la más frecuente de todas es la anastomóticas es suficiente para mantener su
arteriosclerosis, que disminuye la luz vascular, ade- función; por lo tanto, la muerte de la sustancia
más de provocar el proceso antes explicado; esto se nerviosa no llega a produ- cirse. Por el contrario,
puede ver favorecido por la HTA, que interactúa si- un vaso arterial puede estar obstruido de forma
multáneamente, ya que ella es uno de los principa- incompleta y, sin embargo, ocurrir un infarto
les factores aterogénicos conocidos, a causa de los cerebral extenso, porque en este caso la
daños que produce en el endotelio vascular. Aunque circulación colateral no está lo suficiente- mente
la arteriosclerosis puede comenzar en la infancia y
desarrollada y el tejido nervioso muere. La
aun en la vida intrauterina, por lo general se hace
rapidez con que tiene lugar la oclusión del vaso y el
evidente después de los 50 años, aumenta de forma
proporcional a la edad y es agravada por la HTA, estado de la presión arterial, son otros factores im-
hiperlipemia, DM y el hábito de fumar, que a su vez portantes en el desarrollo del infarto cerebral.
son factores de riesgo comunes en los pacientes con Fisiopatología
trombosis cerebral. Al obstruirse el vaso sanguíneo, la falta de circula-
ción ocasiona una disminución del aporte de los
prin-
386
cipales substratos energéticos de las células del SNC Es importante precisar con el enfermo o sus fami-
(oxígeno y glucosa); como alternativa, las células liares sobre la presencia o no de síntomas
aumentan la captación de glucosa y oxígeno de la prodrómi- cos o progresión del cuadro, ya sea por
sangre, pero si continúa la isquemia y el aporte de san- modificación o empeoramiento de los síntomas o
gre cae a menos de 30 ml/100 g de tejido cere- aparición de otros, que muchas veces no motivan
bral/min, se comienzan a manifestar los signos suficientemen- te al paciente para considerarlo
neurológicos; si persiste la isquemia y el aporte dis- parte del cuadro clí- nico. Éste puede quejarse de
minuye a menos de 15 a 18 ml/100 g de tejido/min, cefalea, lo cual posee cierto valor localizador, ya
se produce una ausencia de actividad eléctrica que que si la trombosis se ha producido en la carótida o
se traduce por una inactividad funcional neuronal, sus ramas, tiene localiza- ción frontoparietal
pero potencialmente reversible si se restituye el flu- homolateral, pero si el territorio vertebrobasilar es
jo; pero si continúa el problema y el flujo se reduce el afectado, la ubicación será occipitocervical o
a 10 ml/100 g de tejido cerebral/min, ocurren altera- frontal difusa.
ciones electrofisiológicas en la membrana celular y El síndrome neurológico por excelencia de la TC
muerte cerebral. es la hemiplejía, muchas veces acompañada de pa-
Generalmente la zona central dependiente de la rálisis facial central, afasia, signos de Babinski y de
arteria nutricia ocluida, queda expuesta de forma Hoffman e hiporreflexia.
brusca a una importante reducción del flujo, y si la Desde el punto de vista topográfico la TC es la
circulación colateral demora en suplir esta merma, que más se ajusta a los territorios neurovasculares
también se extiende el tiempo de exposición a la is- afectados.
quemia, por lo que es frecuente que a este nivel se El cuadro clínico es muy variable y depende de
produzca un área de infarto (muerte cerebral), la que la arteria ocluida. En sentido general hay grados
queda rodeada de una zona, donde por apertura de va- riables de toma de la conciencia acompañando a
vías colaterales, se restituye de forma parcial el flu- cual- quier territorio vascular afectado, aunque se
jo, lo que permite a las células conservarse vivas, sabe que las lesiones que dañan la cápsula interna
aunque aletargadas, afuncionales, sin actividad eléc- producen con frecuencia estado de coma, al igual
trica. Esta área afectada se conoce como “zona de que las ce- rebelosas, que por edema y compresión
penumbra isquémica”, que es potencialmente rever- lesionan el tallo cerebral; pero todo esto depende
sible si se restablece el flujo sanguíneo. fundamental- mente del tamaño del vaso ocluido,
estado de la cir- culación colateral y estado físico de
Cuadro clínico
la sangre.
Los pacientes presentan con frecuencia pródromos Resumiendo, se puede plantear que cuando se
en las horas o días que preceden al accidente, como presenta una hemiplejía directa, disartria o afasia,
parestesias, paresias, afasia, trastornos visuales, en
convulsiones, trastornos sensitivos del lado parali-
oportunidades asociados a descontrol de la presión
zado y alteraciones psiquiátricas, la lesión radica en
arterial, y no es raro que hayan sufrido episodios de
el territorio anterior o carotídeo. Cuando se
ataques transitorios de isquemia cerebral (ATI) pre-
produce una hemiplejía alterna, trastornos
vios.
A menudo el cuadro se instala por la noche du- sensitivos cruza- dos, ataxia, nistagmo, temblor y
rante el sueño y el enfermo se despierta por la ma- mioclonias, las afec- ciones son del territorio
ñana con un hemicuerpo paralizado, o el familiar posterior o vertebrobasilar. Por último, hay
nota algún trastorno en el ritmo o frecuencia respi- síntomas como náuseas, vómitos, disartria,
ratoria, ronquido anormal, incontinencia esfinteria- ceguera y trastornos de la conciencia, que son
na, etc. A veces el accidente ocurre mientras el expresión de una oclusión en cualquier territo- rio
paciente toma el desayuno o temprano en la maña- y es entonces que se deben precisar los otros sig-
na. Generalmente el cuadro se instala de forma gra- nos acompañantes y la evolución del cuadro, de
dual y progresiva, a “saltos”, en horas o más rara manera que permitan enmarcarlo en un territorio
vez en días (ictus en evolución), aunque a menudo vascular específico.
se presenta de forma apoplética. A continuación se exponen algunos cuadros clí-
nicos que guardan relación con la topografía de la
lesión.
387
Arteria carótida interna. Hay hemiplejía contra- Técnicas de neuroimagen (las más importantes
lateral, directa, total y proporcional, trastornos sen- en la fase aguda).
sitivos en el hemicuerpo contralateral, hemianopsia Tomografía axial computadorizada. Precisa la
homónima. Si la lesión cerebral es izquierda, se pro- localización y extensión del tejido cerebral
duce una afasia global. afectado
Arteria cerebral media profunda. Ocurre una he- (incluso los pequeños infartos supratentoriales y
miplejía contralateral directa, total y proporcional. lacunares hasta de 0,5 cm), y lo diferencia de la he-
Si la lesión cerebral es izquierda, hay una afasia morragia cerebral desde el inicio del cuadro; tam-
motora. bién se define la presencia de edema cerebral
Arteria cerebral anterior. Es poco frecuente y se adyacente. El infarto isquémico se observa como
caracteriza por una hemiplejía contralateral no pro- una imagen hipodensa. El valor de la TAC es
porcional, con trastornos sensitivos en el miembro menor en el infarto de la sustancia gris cortical y en
inferior, trastornos psíquicos de origen frontal, abu- los infartos del tronco encefálico, debido en este
lia, lentitud; en ocasiones hay signos piramidales bi- caso a las es- tructuras óseas que se interponen y
laterales (paraplejía cortical), incontinencia urinaria, al pequeño ta- maño de éstos.
reflejo de presión contralateral y reflejo de succión. Resonancia magnética nuclear. Al cabo de
Si la lesión cerebral es izquierda, provoca afasia varias horas de producirse el infarto, permite
motora. identificar la localización y extensión de la lesión,
Arteria basilar. Produce una hemiplejía alterna, tanto en la cor- teza cerebral como en los infartos
o sea, parálisis de pares craneales, ataxia cerebelo- lacunares de la base del encéfalo y fosa posterior.
sa, mioclonias, temblor y alteraciones sensitivas en
Además, se pue- de medir el flujo y el metabolismo
el lado de la lesión, y del contralateral, parálisis de
cerebral utilizan- do las técnicas de la
cara, brazo y pierna. Puede haber, además, parálisis
espectrometría y emisión de positrones.
de la mirada conjugada, nistagmo y vértigos.
Gammagrafía cerebral. Confirma el diagnóstico
Arteria cerebral posterior. Se presenta un cuadro
del infarto cerebral a la segunda o tercera semana
complejo, que consiste en ceguera cortical, hemia-
de ocurrir, precisa el edema cerebral y posibilita
nopsia homónima bilateral o una cuadrantanopsia,
estu- diar el flujo cerebral. Su verdadera utilidad
ceguera para los colores, incapacidad para contar o
está en los tumores y abscesos cerebrales.
enumerar objetos, dislexia (dificultad para leer), alu-
Angiografía cerebral. Sigue siendo un método
cinaciones visuales, distorsión de los límites del cam-
confiable de valoración del sistema vascular cere-
po visual, trastornos sensitivos, temblor y ataxia
bral, puesto que detecta estenosis arteriales, placas
cerebelosa; a todo esto se suma una hemiplejía del
aterotrombóticas con o sin ulceraciones,
lado contrario de la lesión.
circulación colateral y la oclusión del vaso
Diagnóstico sanguíneo; incluso, sugiere zonas donde el flujo
está comprometido. Sin embargo, los riesgos de
Para establecer el diagnóstico es importante una complicaciones como: em- bolizaciones por
buena historia clínica que permita precisar la forma desprendimiento de microémbolos de colesterol,
de comienzo del cuadro del enfermo y la evolución disección de la arteria aorta o la carótida y el
de los síntomas, pero es vital la realización de exá- vasospasmo, asociado al impetuoso desarrollado
menes complementarios. de otras técnicas como la TAC y la RMN,
Estudio del líquido cefalorraquídeo. Las moder- hacen que en la actualidad no sea tan uti- lizada.
nas técnicas de neuroimagen lo han hecho inecesa-
rio en la actualidad. El líquido es claro, como agua Técnicas de flujometría no invasoras
de roca, en la mayoría de las ocasiones. A veces es Oftalmodinamometría, oculopletismografía y
ligeramente xantocrómico y entonces se piensa en Doppler supraorbitario. Ellas miden de forma indi-
un infarto hemorrágico y, por lo tanto, en una recta la presión de la carótida interna e identifican
embolia cerebral. Las células y las proteínas son placas de ateroma en la carótida y su bifurcación.
normales, pero a veces están algo aumentadas. Esto Como son pruebas dinámicas, se pueden alterar
correspon- de a infartos cerebrales extensos con cuan- do la placa está calcificada y cuando el
edema cere- bral importante. trombo blan- do tiene la misma densidad que el
flujo de la sangre.
388
Técnica de Doppler transcraneal. Mide el flujo defecto neurológico reversible. Esto depende de
sanguíneo cerebral, tanto en el territorio carotídeo mu- chos factores, a saber: situación previa del
(cerebro anterior y medio), como en el vertebroba- enfermo
silar (cerebro posterior), así como el flujo colateral (inmunológica, nutricional), grado de compensación
en el círculo de Willis; además, identifica estenosis de afecciones crónicas que constituyen riesgo (DM,
o vasoespasmos y la dirección y velocidad del flujo HTA, aterosclerosis), estado de la circulación cere-
sanguíneo. bral, estado físico de la sangre (viscosidad sanguí-
Estudios neurológicos computadorizados. Permi- nea), circulación colateral suplementaria, diámetro
ten identificar una lesión cerebral e incluso determinar del vaso ocluido (mientras más grande el vaso, ma-
qué área está afectada; detectan lesiones funciona- yor área de infarto y peor pronóstico), estructura
les antes de que haya daño estructural, pero no son neu- rológica afectada (la sustancia gris cortical, el
específicos de las enfermedades cerebrovasculares. tallo cerebral, la cápsula interna y el cerebelo
Corroboran la sospecha clínica de lesión sin preci- tienen peor pronóstico), la ocurrencia de
sar la causa. complicaciones y la rapi- dez con que se instaure la
terapéutica. Estos enfermos están generalmente
Otros exámenes deprimidos y malhumorados, hacen negativismo y
Electroencefalograma. No muestra cambios carac- resistencia u oposición al tra- tamiento y a los
terísticos de infarto cerebral, pero la presencia de procederes rehabilitadores, lo que ensombrece el
ondas lentas de gran voltaje en un enfermo con cua- pronóstico. Son obstinados y para- noides, se
dro de TC, lo descarta. En este caso debe pensarse cansan con tanta facilidad, que en oportu- nidades
en una hemorragia o en un tumor cerebral. se dificulta la rehabilitación física.
Radiografía de tórax, hemograma, creatinina, Todo esto se exacerba cuando mejora la concien-
ionograma, gasometría y glicemia. Son estudios in- cia y reconocen el defecto motor, sensitivo o senso-
dispensables para evaluar el estado inicial del enfermo rial. Estos pacientes tienen grandes posibilidades de
y buscar posibles complicaciones en su evolución. presentar complicaciones agravantes (ver “Hemo-
Evolución y pronóstico rragia cerebral”) y de quedar con secuelas que afectan
su calidad de vida, como hemiplejías, convulsiones,
La recuperación neurológica varía desde práctica- trastornos del lenguaje, demencia, trastornos esfin-
mente total hasta nula. Si después de 2 semanas de terianos, periartritis (hombro congelado, síndrome
producirse el accidente no se ha iniciado la recupe- hombro-mano) y anemia, entre las más comunes.
ración de los movimientos, la función neurológica La TC puede repetir en los 3 meses siguientes a
que se logre será pobre, y puede afirmarse que la un primer episodio, con más riesgo en el primer
parálisis que persiste durante 5 o 6 semanas casi con año. Éste es mayor si no se hace tratamiento
toda seguridad será definitiva; aunque se aceptan antiplaque- tario.
hasta 2 años para recuperar la función motora con
una fisioterapia óptima. Tiene mejor pronóstico la Tratamiento
afasia motora que la sensorial. La función esfinte- El tratamiento, además de la prevención, debe in-
riana por lo general regresa con la conciencia. Al- cluir los siguientes aspectos:
gunos enfermos quedan con un síndrome convulsivo
y en otros persiste un molesto vértigo, a causa de 1. Evaluación emergente y medidas generales
disfunción vestibular. La evaluación emergente depende del estado del
Cuando existe un estado de coma inicial, el pro- en- fermo. Si está consciente, deglute sin dificultad,
nóstico es malo, puesto que las complicaciones in- no tiene secreciones traqueobronquiales y coopera
fecciosas (sobre todo respiratorias en forma de para los procederes médicos, se pone tratamiento
bronconeumonía) complican gravemente al pacien- por vía oral y se vigila su evolución por un
te. Resulta difícil hacer un pronóstico certero en las personal adies- trado (médico y de enfermería). Si
primeras 72 h de la evolución de la enfermedad, pues el estado es gra- ve, con cualquier grado de toma
la trombosis puede extenderse y llevar a la persona de conciencia, dificultad para deglutir o trastornos
hasta la muerte, o regresar por completo con un respiratorios, se aplican medidas protectoras, como
los cuidados ge- nerales y de enfermería siguientes:
a. Pasar sonda nasogástrica (Levine).
389
b. Pasar sonda vesical. en un plano inferior a la vejiga urinaria para evitar
c. Aseo y protección ocular. el reflujo de orina, la estasis y la infección.
d. Higiene y protección de la mucosa oral. 2. Tratamiento medicamentoso.
e. Aseo corporal las veces que sea necesario. a. Reperfusión:
f. Mantener el lecho del enfermo seco, limpio y • Medicamentosa: Trombolisis. Para utilizar
las sábanas estiradas. esta terapéutica es necesario que hayan
g. Aspirar las secreciones traqueobronquiales las trans- currido menos de 3 h de iniciado el
veces que sea necesario. acciden- te vascular encefálico isquémico,
h. Oxigenoterapia. que la TAC o la RMN hayan descartado
i. Proteger las zonas o puntos de apoyo. una hemorragia cerebral y que la presión
j. Alinear las estructuras corporales (proteger las arterial sea inferior a 180 la máxima y a 110
áreas de parálisis). la mínima.
k. Cuidado de los abordajes venosos. El único agente que ha probado su utilidad (reca-
l. Adiestrar al familiar o personal auxiliar en los nalización del vaso hasta en el 60 % de los enfer-
cuidados del enfermo. mos), es el activador del plasminógeno hístico
m.Preparación psicológica del paciente y fami- recombinante (Recombinant tissue type plasmi-
liares sobre la enfermedad (gravedad y conse-
nogen activator) (rt- PA).
cuencias posibles).
La uroquinasa, la estreptoquinasa y el single-
n. Vigilancia estricta de los signos vitales.
chain urokinase plasminogen activator (scu-PA),
o. Mantener alerta sobre signos de alarma neuro-
se con- sideran aún agentes experimentales.
lógica (convulsiones, modificación del estado
• Métodos intervencionistas (angioplastia trans-
de conciencia, alteraciones de la conducta u
luminar percutánea).
otros).
b. Antiagregantes plaquetarios. Tienen efecto
p. Profilaxis de trombosis venosas profundas y
pre- ventivo de nuevos episodios y se aplican
tromboembolismo pulmonar. En las prime-
desde el inicio. El más eficaz, barato y de fácil
ras 24 a 48 h se debe mantener al paciente en
adqui- sición de todos ellos es el ácido
posición horizontal sin almohada, con canali-
acetilsalicílico
zación, preferiblemente de una vena profunda
(ASA) o aspirina, que se administra en dosis
para administrar líquidos, electrólitos y medi-
de más de 160 mg y menos de 1 g diario.
camentos. En nuestro servicio se utilizan las
Cuando el paciente no puede tratarse con aspi-
soluciones de dextrosa al 10 %, acorde con la
rina, se administra: dipidiramol, 150 mg
superficie corporal del enfermo, estado cardio-
diarios fraccionados cada 8 a 12 h; ticlopidina,
vascular y renal, entre 1 000 a 3 000 ml en 24
250 mg 2 veces al día; sulfimpirazona, 200
h. Algunos autores prefieren soluciones sali-
mg 4 veces al día; triflusal, 300 a 900 mg
nas para evitar hiperglicemias y acidosis en el
diarios, clopido- grel, 75 mg diarios (dosis
área del infarto. Con soluciones glucosadas y
única).
control de la glicemia hemos obtenido buenos
resultados. c. Anticoagulantes. Se emplean en algunos casos
de trombosis en evolución siempre que se des-
carte por TAC o RMN un proceso
La protección ocular se realiza con solución sali-
hemorrágico
na o agua estéril en forma de fomentos durante 20 min
cada 4 h, hasta las 10 p.m., previo lavado ocular. (ver el capítulo “Enfermedad tromboembólica
Para el aseo oral se usan soluciones antisépticas o venosa”).
salinas, y para la protección vesical del catéter o son- d. Vasodilatadores cerebrales. Son útiles desde
da, se emplea sulfaprim (trimetoprim, 80 mg; el inicio, pues mejoran la circulación local y
sulfisoxazol, 400 mg) a razón de 2 tabletas cada 12 h, colateral, con lo que se logra un efecto neuro-
hasta por lo menos 72 h después de retirado el caté- protector. Se recomiendan los siguientes:
ter; éste debe cambiarse 2 veces en la semana y • Nicardipino, 20 o 30 mg 2 o 3 veces al día;
drenar en dispositivos estériles, colocados siempre cinarizina, 75 a 150 mg diarios, en dosis
úni- ca o fraccionada; flunarizina, 5 o 10 mg
dia- rios; dihidroergotoxina, 2 a 5 mg en
dosis fraccionada en 3 tomas o en una dosis
única; isoxsuprina, 10 o 20 mg cada 6
u 8 h; trimetazidina, 20 mg cada 8 a 12 h;
vimbur-
390
nina, 20 mg cada 6 h; vincamina, 40 a 80 mg porción proximal o de las vertebrales y basilar; sue-
diarios en 2 a 4 dosis; nicergolina, 5 o 10 mg len producir déficit neurológico de más de 24
cada 8 h, y ácido nicotínico, 150 a 300 mg horas. En la década de 1960, Miller Fisher
diarios, fraccionados en 3 tomas. describió los
Los 3 primeros productos tienen efectos va- cuatro síndromes lacunares clásicos:
sodilatadores y el nicardipino, además, es hi-
potensor por causar vasodilatación periférica; a) Hemiparesia motora pura.
b) Síndrome sensitivo puro.
el resto, además de ser vasodilatadores, me-
c) Paresia crural con ataxia homolateral
joran la actividad de la membrana neuronal
(hemipa- resia atáxica).
y la conexión interhemisférica, por lo que son
d) Disartria-mano torpe.
neuroprotectores.
e. Otros neuroprotectores. Eliminan radicales
Posteriormente se describió el síndrome sensiti-
superóxidos del oxígeno en el área de isque-
vo-motriz, y aunque después se han hecho decenas
mia; son ellos: de descripciones clinicopatológicas, sólo se recono-
• Piracetam, citicolina, vitamina A, vitamina E cen los mencionados con anterioridad, los que
y vitamina C. cons- tituyen de manera aproximada el 10 % de
f. Modificadores hemorreológicos. Mejoran el todos los accidentes cerebrovasculares.
flujo cerebral en el área isquémica y abren la
circulación colateral; además, tienen efectos an- Etiopatogenia
tiagregantes plaquetarios: Las arterias perforantes son ramas arteriolares pe-
• Pentoxifilina, 400 mg 2 veces al día por vía queñas de entre 100 y 400 m de diámetro y sin
oral. anastomosis, por lo que su oclusión por cualquier
• Hemodilución con dextrán 40 en la fase de causa produce un infarto cerebral isquémico que
evolución del infarto, a razón de 10 o 12 ml/kg deja una cavidad o laguna. Se reconoce la HTA
de peso corporal (hipervolémica) o haciendo como elemento de riesgo. La oclusión en sí puede
extracción de la misma cantidad de sangre deberse a procesos aterotrombóticos, lipohialinosis,
que de solución de dextrán administrada arteritis, émbolos y dilataciones perivasculares.
(normovolémica). Sólo las dos primeras causas son frecuentes. A
3. Rehabilitación. veces se recoge el antecedente de DM.
Es recomendable desde el principio la rehabili-
tación física del paciente, que se mantiene al egreso Anatomía patológica
si queda secuela, hasta 2 o 3 meses. También se han Son localizaciones frecuentes de infartos lacunares
aconsejado algunos métodos de medicina tradicio- las siguientes: putamen, protuberancia, sustancia
nal china, como la acupuntura y digitopuntura; así blanca, corona radiata, núcleo caudado, cuerpo ca-
como el uso de la oxigenación hiperbárica cuando lloso, cápsula interna, tálamo, globus pallidus, etc.
el enfermo lo permita, sobre todo para los pequeños Son cavidades siempre menores de 2 cm, aunque
infartos del tallo cerebral. algunos consideran sólo hasta 1,5 cm (lo más co-
mún es entre 1 y 4 mm), situadas en las zonas
irriga- das por las arterias perforantes; estas
INFARTO CEREBRAL cavidades generalmente están ocupadas por
líquido y se pue- den ver al microscopio los
DE TIPO LACUNAR cambios vasculares sub- yacentes.

Los infartos lacunares (IL) son lesiones de pequeño Cuadro clínico


diámetro localizadas en zonas profundas del en- Varía según el sitio de la lesión.
céfalo, en las áreas irrigadas por las pequeñas arte- Hemiparesia motora pura. Hay paresia o paráli-
rias perforantes cerebrales procedentes del polígono sis de un hemicuerpo, proporcional o no, sin déficit
de Willis, ya sea de la arteria cerebral media en su sensitivo, visual, trastornos de conciencia u otra fun-
ción nerviosa superior.
391
Síndrome sensitivo puro. Es un trastorno sensiti- Diagnóstico
vo que puede ser deficitario (hipoestesia) o irritati- Para establecer el diagnóstico es muy importante
vo (parestesias), que afecta tanto la sensibilidad
hacer una buena anamnesis y un examen físico
superficial como la profunda o sólo una de ellas, lo
exhaustivo, que permitan detectar la presencia de
que depende de la magnitud y localización de la le-
sión. los síntomas que identifican al IL, al igual que la
Hemiparesia atáxica. Se caracteriza por la apari- ausencia de otros, que precisamente por faltar ca-
ción de un síndrome piramidal asociado a ataxia del racterizan a estos cuadros; la TAC de cráneo y la
mismo lado; la dismetría braquiocrural no se justifi- RMN (sobre todo esta última) son elementos indis-
ca por el grado de paresia. pensables para identificar los IL.
Disartria-mano torpe. Consiste en la asociación Los que se presentan en la fosa posterior suelen
de disartria con paresia facial central, hiperreflexia estar enmascarados por las estructuras óseas en la
ipsilateral, signo de Babinski y torpeza en la mano, TAC, pero se pueden hacer evidentes con la RMN.
que se hace evidente al realizar tareas manuales que El diagnóstico diferencial debe hacerse con los
requieren habilidad (ejemplo, escribir), sin que exista procesos expansivos, hemorragias cerebrales,
un defecto motor concomitante. infartos isquémicos extensos o enfermedades des-
Síndrome sensitivo-motriz. Consiste en un síndro- mielinizantes.
me piramidal total o parcial, proporcional o no, aso-
Pronóstico y tratamiento
ciado a cualquier defecto sensitivo del mismo lado.
Desde el punto de vista clínico, los IL tienen as- El pronóstico inicial es bueno y la recuperación to-
pectos comunes dados por signos que están ausen- tal casi siempre posible, pero con la repetición pro-
tes, independientemente de la forma clínica: gresan a un síndrome seudobulbar y a la demencia
vascular, lo cual es factible prevenir con un trata-
a) Síntomas neurológicos ausentes. miento adecuado de la HTA, y en los producidos
• Defectos visuales y oculomotores. por microateromatosis, con el uso de un antiagre-
• Toma de la conciencia. gante plaquetario. Puesto que discernir la causa re-
• Convulsiones. sulta complejo, se aconseja asociar ambos
b) Síntomas neuropsicológicos ausentes. tratamientos. No se deben usar anticoagulantes.
• Afasia.
• Apraxia.
• Agnosia. EMBOLIA CEREBRAL
• Negligencia.
• Trastornos de la memoria. Concepto
• Deterioro de funciones superiores. c)
Síntomas clínicos generales ausentes. Se denomina embolia cerebral (EC) al cuadro clíni-
co que resulta de la oclusión súbita de una arteria
• Vómitos.
cerebral por un fragmento desprendido de un coá-
• Cefalea.
gulo o por cualquier otro agregado de materia sóli-
• Síntomas vegetativos. da, y de la muerte por isquemia de las neuronas
situadas en el territorio cerebral irrigado por la arte-
Cuando el IL se presenta primero en un hemisfe- ria ocluida.
rio y luego en el otro, separado por un tiempo supe-
rior a 2 meses, se produce la base histopatológica Etiopatogenia
del estado seudobulbar. Múltiples causas pueden originar un émbolo (cua-
Muchas veces estos cuadros pasan inadvertidos dro 39.3), aunque en sentido general se desencade-
para el paciente o les da poco valor por considerar- nan los mismos mecanismos fisiopatológicos que
los banales e, incluso, ni acuden al médico; otras en la trombosis cerebral, pero la rapidez con que se
veces cursan asintomáticos o como un ATI. pro- duce el fenómeno y su evolución le
confieren un perfil temporal muy peculiar.
392
CUADRO 39.3 de la oclusión ocurre la acidosis, causa de vasodila-
CAUSAS DE EMBOLIA CEREBRAL
tación del tramo proximal de la arteria, que además
I. Causas cardíacas. ayuda al fraccionamiento del coágulo y su migra-
1. Infarto del miocardio. ción a la periferia. Esto hace que el enfermo mejore
2. Trastornos del ritmo. desde el punto de vista clínico; pero, por otra parte,
• Fibrilación auricular. si la hipoxia se prolonga con daño estructural de la
• Nódulo sinusal enfermo. pared vascular, entonces puede producirse un infar-
• Bloqueo auriculoventricular.
• Fibrilación ventricular (cardioversión).
to hemorrágico por ruptura de la barrera hematoen-
• Otras.
cefálica.
3. Enfermedades valvulares. Los cambios hemodinámicos y metabólicos ha-
• Valvulopatía reumática (mitral). cen que por delante de la oclusión ocurra hiperten-
• Prolapso de la válvula mitral. sión y apertura de vasos colaterales. Todo esto
• Prótesis valvular. explica su aparición brusca y su repercusión en bre-
• Estenosis y calcificación aórticas.
ve plazo.
• Otras.
La fibrilación auricular es la primera afección
4. Otras afecciones estructurales.
• Mixoma auricular. cardíaca asociada al embolismo cerebral y es el
• Endocarditis (infecciosa o no infecciosa). más importante factor de riesgo de los pacientes de
• Aneurisma ventricular. más de 80 años, especialmente mujeres. El
• Cardiopatía congénita (émbolo paradójico). aumento de las complicaciones por fibrilación
• Miocardiopatías.
auricular se ve favorecido por enfermedades
• Otras.
cardíacas como:
5. Cirugía cardíaca.
• Enfermedades de las arterias coronarias.
II. Causas vasculares.
1. Trombos arteriales (émbolo arteria-arteria). • Miocardiopatías.
• Carótidas. • Carditis reumática.
• Aorta.
• Vertebrobasilar (infrecuente). El embolismo cerebral ocurre con más frecuen-
2. Trombosis venosa pulmonar. cia (sobre todo los de origen cardiogénico) en la ar-
III. Otras causas (infrecuentes). teria cerebral media o sus ramas (80 %), en la
1. Cirugía (complicadas). cerebral posterior y sus ramas (11 %) y el resto en
• Cuello (tiroides).
las arterias basilar y vertebrales; son muy raros en
• Torácica.
la cerebral anterior.
2. Grasa.
3. Tumor. La endocarditis infecciosa es una causa impor-
4. Aire. tante de EC. Las vegetaciones friables de la válvula
5. Burbujas de nitrogéno (en los buzos). enferma fácilmente desprenden émbolos que suelen
6. Otras. alojarse en el cerebro. La naturaleza séptica de éstos
IV. Origen indeterminado (frecuente). hace que con alguna frecuencia se produzcan me-
ningoencefalitis focales o difusas, abscesos
cerebra- les y aneurismas micóticos.
La oclusión vascular ocurre siempre que el diá-
La presencia de cardiopatías congénitas con co-
metro de la luz arterial sea menor que el émbolo
municación anormal de las cavidades cardíacas, o
circulante por el lecho cerebral, lo que hace que se del circuito pulmonar con el sistémico, ocasiona el
produzca una isquemia cerebral local en el territo- embolismo cerebral paradójico, llamado así porque
rio afectado, cuya magnitud estará en dependencia los émbolos se originan en la periferia, pero se des-
del tamaño del émbolo y, por tanto, del vaso ocluido. vían en las cavidades cardíacas y no pasan el filtro
Consecutivo a la isquemia, se desencadenan sus del lecho capilar pulmonar. Las placas de ateroma
consecuencias; así, en el tramo ocluido se produce de los grandes vasos arteriales del tórax y el cuello
hipoxia en la zona neurológica correspondiente a son fuente de émbolos pequeños que producen cri-
aquél, y si se prolonga, provoca un infarto cuyo diá- sis de isquemia cerebral transitoria, aunque el de-
metro dependerá de la circulación colateral sarrollo de un trombo desprende a veces émbolos
supletoria; por otro lado, inmediatamente después mayores de su cola y da el cuadro clínico de la
embolia de origen indeterminado.
393
Cuadro clínico ocasiones xantocrómico y excepcionalmente he-
El cuadro se presenta de forma inesperada, aunque morrágico. La presión puede estar aumentada si el
edema cerebral es importante. Las proteínas y las
en ocasiones existen pródromos (cefalea) desde unas
células casi siempre son normales, aunque al igual
horas antes. El ataque ocurre a cualquier hora del
que en la trombosis cerebral alcanzan a veces cifras
día, sobre todo cuando el paciente está en actividad, considerables. En caso de embolismo séptico, las
lo que aumenta el trabajo cardiovascular y facilita cé- lulas y las proteínas se elevan, la glucosa
el desprendimiento del émbolo; aunque también su- permane- ce normal o disminuye, y la fórmula
cede durante el sueño. En la cuarta parte de los ca- leucocitaria se altera según la naturaleza y agudeza
sos se observa pérdida del conocimiento, que pronto del proceso. Estudios de coagulación. Se deben
es sustituida por un estado confusional o de aturdi- realizar bus- cando causas hematológicas del
miento. La cefalea es habitualmente molesta, al igual embolismo y son útiles como punto de partida para
que los otros signos neurológicos; puede tener la la terapéutica an-
misma topografía que se refirió en el epígrafe “Trom- ticoagulante.
bosis cerebral”. Son frecuentes las convulsiones lo-
calizadas o generalizadas. El cuadro clínico mejora Diagnóstico
con rapidez, aunque existen casos que progresan por En nuestro medio es el accidente vascular encefáli-
las causas explicadas en la etiopatogenia. co que menos se diagnostica, lo que contrasta con
La hemiplejía derecha con afasia representa el las estadísticas de otros lugares, en que la EC
cuadro neurológico que aparece con mayor frecuen- alcan- za hasta el 80 % de los infartos cerebrales.
cia (afección de la arteria cerebral media profunda), Desde el punto de vista clínico, el diagnóstico de
pero se observa cualquier déficit neurológico motor, EC se basa en la aparición súbita del cuadro neuro-
sensitivo, sensorial, de pares craneales, etc., según lógico, sin pródromos, la rapidez para completar el
el vaso ocluido (síndromes neurovasculares). cuadro clínico, el hallazgo de un foco embolígeno y
Es importante buscar y precisar en la clínica los la presencia de accidentes embólicos en otras
síntomas y signos cardiovasculares, centrales o pe- partes del organismo, con evolución regresiva de
riféricos, según la causa que originó el émbolo u los sig- nos neurológicos. Todo esto se
otra, si existe. complementa con los exámenes mencionados
anteriormente, que permi- ten confirmar el
Exámenes complementarios diagnóstico.
Pruebas imagenológicas. La TAC, RMN y el El diagnóstico diferencial es muchas veces con-
Doppler transcraneal permiten precisar la localiza- tradictorio al faltar el foco embolígeno, y es la he-
ción y extensión del infarto (ver “Trombosis cere- morragia cerebral intraparenquimatosa el accidente
bral”). cerebrovascular con el que más se confunde
Angiografía cerebral. Se debe realizar sólo cuan- clínica- mente, aunque la evolución progresiva de
do se considere posible hacer una endarterectomía. la hemo- rragia y regresiva del embolismo los
Estudios carotídeos no invasivos. Con técnica diferencian. La incidencia de EC en operaciones
Doppler permiten excluir una estenosis carotídea cardiovasculares del Centro de Cirugía
significativa como causa del émbolo. Cardiovascular en Santiago de Cuba no es
Ecocardiograma. Debe realizarse para determi- significativa.
nar si el émbolo estuvo originado por un trombo En la mesa de Morgagni no siempre es fácil el
cardíaco o por una disquinesia del miocardio. Es muy diagnóstico, pues con frecuencia el émbolo se
recomendado el ecocardiograma transesofágico. desintegra y se disemina entre los vasos de
Electrocardiograma. Siempre debe hacerse para pequeño calibre y desaparece (fibrinólisis), por lo
destacar arritmias, cardiopatías orgánicas o infarto cual el diag- nóstico histopatológico debe hacerse
cardíaco como causa de la EC. por inferencia, al no haber oclusión trombótica en
Estudio del LCR. Cuando existen posibilidades el vaso preciso para producir el infarto cerebral que
de técnicas de neuroimágenes, la punción lumbar
se observa; ade- más, por el carácter hemorrágico
no es necesaria. El LCR casi siempre es claro, en
del infarto, la pre- sencia de émbolos en otros
órganos (riñón, bazo, extremidades) y la
identificación del foco embolí- geno, etc.
394
Pronóstico en fase aguda, el empleo de anticoagulantes tiene el
Uno de cada 10 casos muere a las pocas horas de riesgo de provocar la extensión del infarto cerebral
hemorrágico o de que se produzca un verdadero he-
producirse el accidente, bien sea por lesión de los
matoma. Cuando no existen técnicas de neuroima-
centros nerviosos vitales o por el desarrollo de un
gen o si éstas muestran un infarto hemorrágico, es
edema masivo. aconsejable usar los anticoagulantes 2 o 3 semanas
El peligro de recidiva es grande y la mortalidad después del debut del cuadro neurológico (ver el
en un segundo accidente cuatro veces mayor. Las ca- pítulo “Enfermedad tromboembólica venosa”).
complicaciones ensombrecen el pronóstico. La po- Los anticoagulantes no deben emplearse cuando el
sibilidad de recuperación neurológica varía, aunque pa- ciente se mantiene hipertenso, en la
habitualmente se obtiene una buena rehabilitación endocarditis in- fecciosa, las úlceras pépticas, los
funcional. Es la forma clínica de las enfermedades trastornos de la coagulación, daño hepático y en
cerebrovasculares que menos secuelas tiene. El de- los mayores de 85 años. Es útil hacer, además, un
sarrollo alcanzado por la cirugía vascular, las válvu- conteo de plaquetas y no usarlos cuando hay
las sintéticas de materiales más complejos y trombocitopenia. La apli- cación de los
heparinas de mayor calidad, reducen de forma sig- anticoagulantes orales debe mantener- se entre 6
nificativa las recidivas cuando se hace un tratamiento meses y 1 año como mínimo y en los enfermos
adecuado. donde no es posible hacer corrección qui- rúrgica
del foco embolígeno se pueden utilizar de por
Tratamiento vida. Ya existen heparinas de bajo peso molecu- lar
que eliminan varios riesgos de la heparina con-
En los primeros días las medidas generales depen- vencional. Es importante educar al paciente acerca
den del estado de conciencia del paciente. Si se pre- de los signos de alarma por sangramiento cuando
senta un estado de coma, se aplican todas las medidas emplean anticoagulantes y la necesidad de suprimir
descritas en “Estado de coma” y “Trombosis cere- el fármaco y acudir al médico cuando esto ocurre.
bral”. La asociación con antiagregantes plaquetarios es
El tratamiento neuroprotector no difiere en nin- frecuente sin mayores riesgos, sobre todo después
guna de las formas clínicas de enfermedades cere- de implantar una prótesis valvular cardíaca;
brovasculares (ver “Trombosis cerebral”); también también se pueden usar cuando estén
debe vigilarse la presión arterial. En nuestra expe- contraindicados los anticoagulantes y la fuente
riencia, en los pacientes con EC no es frecuente la embolígena no sea car- diogénica; en estos casos se
ocurrencia de hipertensión. Si existe hipotensión emplean en forma simi-
asociada con infarto cardíaco, es conveniente mejo- lar a lo descrito en la trombosis cerebral.
rarla; se pueden usar incluso drogas vasoactivas. La fisioterapia respiratoria y rehabilitadora se
El edema cerebral se trata cuando se hace sinto- debe instaurar precozmente. Se recomienda la
mático o si fuera muy extenso, según los exámenes oxigena- ción hiperbárica, que debe comenzar en
de neuroimágenes. Por la frecuencia con que se pre- las prime- ras 48 h y darse cuantas sesiones requiera
sentan hay que vigilar y tratar las convulsiones; son el enfermo.
útiles la fenitoína y el fenobarbital, ambos a la dosis
de 100 a 300 mg diarios. Al inicio se usa la vía EV y
luego la oral. ATAQUE
Los anticoagulantes encuentran en la EC su me-
jor indicación. Constituyen un pilar importante en TRANSITORIO DE
la profilaxis de los casos de fibrilación auricular cró-
nica y paroxística, cardiopatía reumática con valvu-
ISQUEMIA CEREBRAL
lopatía mitral, después de cirugía cardiovascular con
circulación extracorpórea, en la sustitución valvu- Concepto
lar, en la cardioversión eléctrica y en los pacientes El ataque transitorio de isquemia cerebral (ATI), no
con infarto cardíaco después del tratamiento trom- es más que el cuadro clínico resultante de la interrup-
bolítico. En el enfermo con EC de origen cardíaco ción focal y transitoria de la circulación encefálica,
395
y que tiene como base una insuficiencia cerebro- menos de la autorregulación del flujo cerebral. Se
vascular que condiciona la incapacidad circulatoria conocen también otros fenómenos hemodinámicos
cerebral. que pueden provocar crisis pasajeras por afectar
Se presenta generalmente de forma brusca, carac- áreas previamente dañadas, que son sensibles a la
terizado por trastornos subjetivos y objetivos de corta dismi- nución del gasto cardíaco o espasmos de
duración (casi siempre segundos o minutos) y que los gran- des vasos. Por último, el aumento de la
se recuperan por completo en el curso de las 24 h viscosidad de la sangre reduce el flujo en las áreas
siguientes al comienzo del cuadro clínico. Cuando estenóticas, malformadas u otras.
algunos síntomas desaparecen, pero otros duran más Las zonas irrigadas por el sistema vertebrobasi-
de 24 h, deja de ser un ATI; por el contrario, es muy CUADRO 39.4
frecuente que al acudir el paciente al médico el exa- CAUSAS DE ATAQUES TRANSITORIOS
men físico sea negativo y ya no tenga síntomas sub- DE ISQUEMIA CEREBRAL
jetivos; pero por la forma de presentarse, agruparse
I. Aterosclerosis.
y desaparecer se considera como tal y es tributario • Por daño in situ.
de estudios exhautivos. • Por embolización distal (frecuente).
Cuando la interrupción de la circulación encefá- II. Émbolos de origen cardíaco.
lica es transitoria, pero generalizada, al cuadro re- • Trastornos del ritmo.
sultante se le denomina síncope. • Valvulopatías.
III. Vasculitis.
Etiopatogenia IV. Trastornos hematológicos (estados de hipercoagula-
bilidad).
La explicación etiopatogénica más aceptada es la V. Drogas.
teoría de los émbolos arteria-arteria. Se plantea que VI. Otras.
estos se producen fundamentalmente en la aorta o
en los grandes vasos del cuello, pues al dañarse el lar, en especial el tallo y el cerebelo, son más
endotelio vascular por cualquier causa, se expone el vulne- rables a la isquemia por fenómenos
tejido conectivo subendotelial, lo que facilita la hemodinámicos y hematológicos que el territorio
adhesión plaquetaria y la formación de fibrina. Las anterior. Por otro lado, la disposición arterial
plaquetas liberan ácido araquidónico y adenosindi- particular de este siste- ma vascular posterior, hace
fosfato, lo que estimula la agregación plaquetaria y que en su mayor parte, los territorios subsidiarios
se produce un coágulo sobre la superficie vascular estén irrigados por ramas terminales que dependen
dañada. Cuando estos agregados plaquetarios aumen- del flujo sanguíneo apor- tado por una arteria
tan de tamaño, de su cola se desprenden fragmentos única, con escasa o nula circu- lación colateral.
con el impulso de la corriente sanguínea, que circu- Este mismo fenómeno explica que la artrosis
lan por el torrente vascular hasta que la luz del vaso cervical con osteofitos marginales, sea causa
se hace más pequeña que su diámetro y lo ocluye comprobada de isquemia cerebral transitoria, pues
bruscamente; se priva así de oxígeno al área de teji- al adoptar el enfermo determinada posición, una
do correspondiente y ocurre una isquemia. Por los de las arterias vertebrales puede ser comprimi- da y
mismos mecanismos explicados en la EC y por ser la corriente sanguínea interrumpida, lo que ori-
este un coágulo poco estructurado, se fragmenta y gina la crisis.
migra a la periferia y desaparece el cuadro clínico, Es ya un hecho demostrado por las técnicas de
de aquí su carácter focal y transitorio. Los émbolos neuroimagen que pequeñas hemorragias
cardíacos por lo general son mejor estructurados. periarteria- les son capaces de producir un cuadro
Existen otros factores (cuadro 39.4) capaces de clínico típico de ATI.
producir o contribuir a los episodios isquémicos.
Cuadro clínico
Aunque muy discutido el espasmo, se plantea que
en el curso de la encefalopatía hipertensiva ocurren Los ataques duran desde varios segundos hasta po-
vasospamos focales cerebrales (crisis espástica de cas horas; entre uno y otro no existen signos de
Pal) causantes de isquemias cerebrales transitorias, alte- ración neurológica. Durante un ataque
puede observarse deficiencia motora, sensitiva,
que regresan al controlar la crisis, o antes por fenó-
sensorial, de pares craneales, etc., en distintas
combinaciones.
396
El cuadro se manifiesta, según el territorio arte- 3 3
rial comprometido, por una de las dos formas clíni-
2 2 2
cas siguientes: síndrome de insuficiencia de la
carótida y síndrome de insuficiencia vertebrobasilar. 1 1 1

Síndrome de insuficiencia de la carótida


Se produce hemiparesia o monoparesia y trastornos
sensitivos en un hemicuerpo o sólo en un segmento a b c
de éste; los trastornos afásicos o disártricos son fre-
cuentes, con parálisis facial central o sin ella. Son Fig. 39.1. Representación esquemática de tres modalidades del
“síndrome del robo de la subclavia”, según el sitio de la oclu-
muy caraterísticas, pero poco comunes, la ceguera sión: a) oclusión de la arteria subclavia izquierda; b) oclusión
monocular transitoria y la hemianopsia. Pueden pre- de la arteria subclavia derecha; c) oclusión del tronco arterial
sentarse estados confusionales y convulsiones loca- braquiocefálico.
lizadas o generalizadas.
La ausencia o disminución de los latidos arteria- el “robo” a veces se produce a expensas del sistema
les de la carótida en el cuello y de la arteria tempo- de la carótida, pero esto sucede con poca frecuencia.
ral superficial, apoyan el diagnóstico de estenosis Las crisis se provocan con el ejercicio del miem-
de la carótida. Si se ausculta un soplo en el trayecto bro superior comprometido, el cual suele tener
del vaso, especialmente en el sitio de la bifurcación de clau- dicación arterial intermitente, retardo y
la carótida primitiva en el cuello o en la mastoides, poca amplitud del pulso, soplo sobre la arteria
las posibilidades aumentan. subclavia y presión arterial disminuida, por lo menos
20 mmHg
Síndrome de insuficiencia vertebrobasilar la sistólica y 10 mmHg la diastólica.
Generalmente el vértigo constituye la única moles- En cualquiera de las formas clínicas de la isque-
tia que aqueja el paciente con este síndrome. Los mia cerebral transitoria, es posible encontrar, ade-
trastornos visuales adoptan casi siempre el tipo de más: cefalea, parestesias, náuseas, vómitos, falta de
diplopia. La hemianopsia es a veces “en cuadrante”. atención, poca memoria, disgrafia, movimientos
Son comunes la disfagia, disartria y nistagmo involuntarios, etc.
vertical. Deben destacarse algunos rasgos comunes en los
Los tratornos de la motilidad y la sensibilidad son ATI.
por lo común idénticos a los del síndrome de insufi-
• A veces suceden durante el sueño y el enfermo
ciencia carotídea. Cuando se produce cuadriparesia
o familiares no lo perciben.
o paraparesia, o cuando los trastornos hemilaterales
alternan de un lado a otro en las distintas crisis, el
• Pueden ocurrir y el paciente no darles valor
a algunos síntomas, por lo que se debe ser
origen vertebrobasilar es casi seguro. Si hubiera he-
exhaustivo al explorarlo, en el interrogatorio y
miplejía cruzada, entonces se puede aseverar dicho
examen físico.
origen.
• En ocasiones predomina un síntoma (el más
Una variedad de insuficiencia vertebrobasilar es
la que se conoce con el nombre de “síndrome del lla- mativo: parálisis, disartria, vértigo, etc.).
robo de la subclavia”. Consiste en la desviación de
Existe un grupo de síntomas aislados que no
la sangre de una de las arterias vertebrales (la dere-
cha casi siempre) hacia la otra, a causa de la estenosis cons- tituyen ATI y que se confunden con ellos,
severa de una arteria subclavia antes del nacimiento entre otros:
de la arteria vertebral. De esta manera, la irrigación • Alteraciones de la conciencia.
del miembro superior del lado ocluido se realiza con • Confusión.
sangre que no llega a alcanzar el polígono de Willis,
• Amnesia.
sino que se desvía hacia la arteria vertebral del lado
• Crisis motoras tónicas o clónicas.
ocluido y gana así la porción posestenótica de la ar-
teria subclavia (Fig. 39.1). Como se comprenderá, • Vértigo aislado.
• Disfagia.
• Incontinencia esfinteriana.

397
Exámenes complementarios Diagnóstico
Exámenes de laboratorio. Evidencian algunos fac- Diagnóstico positivo
tores de riesgo como: hipercolesterolemia, hiperuri- El diagnóstico de ATI es relativamente fácil y se
cemia, policitemia, poliglobulia, hiperproteinemia y establece ante un déficit neurológico focal de apari-
otros. ción súbita y recuperación funcional en menos
Electrocardiograma. Es útil para detectar altera- de 24 h, que se confirma con los resultados de los
ciones del ritmo cardíaco como fuente de microém- exámenes descritos antes, los que muestran la
bolos. causa del ataque, y otros que niegan la persistencia
Radiografía de la columna vertebral. Suele mos- del daño cerebral.
trar una artrosis cervical y la mayor o menor grave-
dad de ésta. Diagnóstico diferencial
Oculopletismografía. Con este examen se obtie- Epilepsia. La esclerosis cerebrovascular es causa
reconocida de epilepsia tardía con crisis generaliza-
ne la presión sistólica de las arterias oftálmicas, que
das o parciales, pero en ocasiones las crisis
refleja con bastante fidelidad la presión de perfu-
epilépti- cas generalmente no convulsivas son
sión de los hemiferios cerebrales correspondientes.
interpretadas como ATI. La historia clínica, el
Cuando existe una diferencia en la amplitud del pulso
electroencefalo- grama y la terapéutica aclararán
entre ambas arterias oftálmicas, mayor de 2 mmHg, las dudas.
se puede afirmar que hay una estenosis no compen- Síndrome de Ménière. Se plantea ante el
sada en una arteria carótida interna. La interpreta- síndrome vertiginoso recidivante, rebelde a la
ción de los resultados se complica cuando hay terapéutica. El examen neurológico cuidadoso
lesiones bilaterales simétricas. tratará de poner de manifiesto la disfunción del
Ecocardiograma. Es muy útil como método de tallo cerebral o del cerebelo. La audiometría será
estudio no invasivo de las estructuras valvulares y decisiva en el diag- nóstico del síndrome de
funcionales cardíacas. Permite diagnosticar trombos Ménière. A veces es la evo- lución la que permite
murales, zonas acinéticas y otras. Igualmente se re- hacer el diagnóstico diferencial, aunque ambas
comienda la ecocardiografia transesofágica. afecciones pueden coexistir.
Ultrasonido modo B de la carótida. Permite diag- Migraña. El diagnóstico diferencial del ATI se
nosticar estenosis por placas de ateroma, trombos, plantea especialmente con la variedad de migraña
compresiones u otra causa que obstruya y disminu- arracimada, de debut tardío en la vida (más de 40
ya el flujo extracraneal. años), con síntomas visuales (hemianopsia), oculo-
Ultrasonido Doppler. Sirve para estudiar la cali- motores (oftalmoplejía), motores (hemiparesia,
dad y dirección del flujo arterial, así como la per- monoparesia), sensitivos (hemiparesias), etc., sin
meabilidad arterial intra y extracraneal, al igual que cefalea acompañante o sólo discreto dolor de cabe-
el metabolismo cerebral a través del flujo. za. El diagnóstico de migraña es difícil en estas cir-
Angiografía. Los estudios angiográficos por ca- cunstancias y sólo la historia clínica permite
teterismo y examen desde los troncos supraórticos descubrir la instalación y progresión sucesiva de
los síntomas migrañosos en un período de 5 a 20
permiten visualizar estenosis, placas de ateroma, ul-
min, lo cual no ocurre en los ATI.
ceraciones, trombos y otras causas de disminución
Hipoglicemia. Sobre todo en ancianos que no
del flujo. Esta técnica, además, es imprescindible
tie- nen antecedentes de diabetes, que generalmente
para el tratamiento quirúrgico o intervencionista.
por las mañanas, después de un sueño prolongado o
Técnicas de neuroimagen. Son necesarias para
ante períodos interalimentarios extensos, presentan
destacar infartos por lesiones cerebrovasculares es- cua- dros bruscos de disartria, parestesias,
tablecidas, o hemorragias pequeñas, que se compor- relajación es- finteriana, e incluso déficit motor; se
tan clínicamente como un ATI. acompañan de sudor frío y viscoso. Su rápida
Técnicas neurofisiológicas. Muestran sufrimien- recuperación des- pués de la administración de
to neuronal durante el ataque y su recuperación pos- dextrosa hipertónica y las cifras bajas de glicemia
terior. confirman el diagnóstico. Encefalopatía
hipertensiva. En ocasiones el diag- nóstico se hace
muy complejo porque ambas afec- ciones
coexisten, pero el hecho de ser más duraderos
398
los síntomas, la presencia de convulsiones, vómi- El enfermo debe hacer reposo en los días que si-
tos, edema de la papila y la recuperación con la re- guen a un ataque, moderar sus actividades físicas e
gresión de las cifras tensionales, ayudan a excluir intelectuales, evitar las emociones fuertes y el
clínicamente esta entidad. stress psíquico. Es recomendable una ligera
El síndrome de Stokes-Adams, el síndrome del sedación. Se evitarán el estreñimiento y la tos.
seno carotídeo hipersensible, la hipotensión
postural, las crisis acinéticas con caída del ancia- Acciones para eliminar factores de riesgo
no, el síncope tusígeno, etc., son otras raras situa- 1. Reducir el peso corporal (si está en sobrepeso).
ciones que plantean el diagnóstico diferencial. 2. Dieta: hipocalórica (si está en sobrepeso), nor-
Existen también lesiones cerebrales establecidas mosódica (si tiene HTA, hiposódica), y libre
como infartos lacunares, hemorragias intracerebra- de colesterol y ácidos grasos polisaturados.
les, procesos expansivos (tumores, abscesos, 3. Ejercicios físicos aeróbicos sistémicos (cami-
hematomas), que se comportan clínicamente, sobre nata).
todo en sus inicios, como un ATI y que los exáme- 4. Eliminar hábitos tóxicos: alcohol, tabaco y café.
nes complementarios descartan. 5. Controlar las enfermedades que constituyen
Por último, cuando el ATI se presenta con amau- ries- go: HTA, DM, arterosclerosis,
rosis fugaz, se debe diferenciar de procesos como hiperlipemias, cardiopatías, etc.
glaucoma, neuritis retrobulbar, oclusión de la arte- 6. Tratamiento quirúrgico de las causas de soplo
ria central de la retina, desprendimiento de retina, carotídeo asintomático.
algunas intoxicaciones, que aunque tienden a durar
más tiempo, deben ser descartadas por exámenes Tratamiento de la causa
oftamológicos especializados. Si la causa consiste en enfermedades valvulares
car- díacas o arritmias, se utilizan los
Evolución y pronóstico anticoagulantes igual que en la EC; si se trata de
Los ATI pueden evolucionar durante períodos pro- procesos inflama- torios arteriales (arteritis), se
longados con crisis muy variables (desde espacia- indican esteroides en dosis antinflamatorias; si es
das en el año, a varias en el día). Su presentación una inflamación infec- ciosa, antibióticos
siempre implica un riesgo de infarto cerebral y lo es (ejemplo, penicilina para la arteritis sifilítica). Si
mucho mayor entre los que sufren crisis carotídea existe artrosis cervical con os- teofitos marginales,
que entre los que presentan ATI vertebrobasilar; otras se hace descompresión con trac- ción cervical
veces las crisis desaparecen para siempre, o se mecánica o manual y tratamiento de medicina
espacían, y el enfermo no tiene más problemas que física y rehabilitación (fonoforesis, ultra- sonido,
los que derivan del cuadro como tal. El período de masajes, ejercicios, etc.), y si es necesario, se llega
tiempo transcurrido entre el primer ATI y el infarto a la corrección quirúrgica del defecto óseo. Cuando
cerebral, en el caso de que ocurra, es imprevisible; hay hiperviscosidad sanguínea (poliglobu- lia,
habitualmente el riesgo es mayor en el primer año trombocitosis, hiperproteinemia, etc.), se puede
consecutivo al ataque inicial, sobre todo en los 2 hacer tratamiento con: pentoxifilina, 800 mg en 2
primeros meses. dosis cada 12 h por vía oral, o hemodilución con
Cuando se usan antiagregantes plaquetarios, se dextrán de bajo peso molecular (dextrán 40), de las
reduce de forma considerable el riesgo de que repita formas siguientes:
el ATI o se produzca un infarto cerebral.
• Hipervolémica: administrar dextrán y hacer
Tratamiento san- gría en cantidad menor que el dextrán.
El tratamiento debe ir encaminado a 3 acciones fun- • Isovolémica o normovolémica: se extrae la
damentales: mis- ma cantidad de sangre que el dextrán que
a) Eliminar factores de riesgo. se ad- ministra.
b) Tratamiento de la causa. • Hipovolémica: se extrae más sangre que el
c) Profilaxis de un nuevo episodio (ATI o in- dextrán que se administra.
farto).
Si existe un foco embolígeno demostrado por los
exámenes complementarios, se hará la corrección
399
quirúrgica, ya sea en el corazón o vascular supraór-
tica. Más modernamente, por métodos de neurorra-
diología intervencionista, se hace la llamada
angioplastia transluminar percutánea.
Profilaxis de un nuevo episodio (tratamiento qui-
rúrgico)
Endarterectomía o plastia parcial óptima cuando
el vaso está ocluido más del 66 % de su luz. Des-
pués se continúa con anticoagulantes y luego con
antiagregantes plaquetarios en las dosis explicadas
en epígrafes anteriores, lo que constituye a su vez el
tratamiento profiláctico de los nuevos episodios.
Fig. 39.2. Corte transversal del encéfalo. Se aprecia un gran
foco hemorrágico parietal derecho, así como otro parietal iz-

HEMORRAGIA quierdo. Obsérvense focos hemorrágicos múltiples disemina-


dos y hemorragias petequiales por congestión venosa.

CEREBRAL que ocurren en los vasos perforantes profundos del


cerebro y que se atribuyen a la HTA crónica.
Existen otras causas de HC intraparenquimatosa,
Concepto pero se ha demostrado luego del desarrollo de la
Se denomina hemorragia cerebral (HC) al cuadro TAC y la RMN, que cuando se controla la HTA en
neurológico resultante de la ruptura de un vaso in- la po- blación general los cuadros de HC se
tracraneal, generalmente de instalación brusca, que modifican y comienza a aparecer lo que se
ocurre con frecuencia en pacientes hipertensos y que donomina hemorra- gia intracerebral lobar, que se
evoluciona con un estado de coma en su forma más presenta en forma de coágulos ovales o circulares
común. Su pronóstico siempre es grave. situados en la sustancia blanca subcortical, sin
Etiopatogenia afectación de los ganglios basales ni del tálamo.
La HTA y dentro de ella la forma maligna, es ante-
cedente frecuente en los que sufren una HC
Cuadro clínico
(Fig. 39.2). Si además de hipertenso el paciente es Las hemorragias intracerebrales hipertensivas no se
diabético (con macroangiopatía), tiene aterosclero- relacionan con el ejercicio físico y se producen casi
sis, arteritis, aneurisma de cualquier etiología, mal- siempre cuando el paciente se levanta, lo que coin-
formaciones arteriovenosas, daños anteriores por cide con el pico alto del ritmo circadiano de la pre-
infarto cerebral isquémico, etc., que debilitan la pa- sión arterial; se asocian con tensiones emocionales
red arterial, es más vulnerable a una HC, que gene- (stress) y se presentan con síntomas y signos neuro-
ralmente es desencadenada por un ascenso brusco lógicos bruscos que dependen de su localización y
de la presión arterial, lo que rompe el vaso por el extensión, acompañados de vómitos, cefalea y en
punto más débil. Se inicia como una pequeña masa oportunidades convulsiones, que ayudan a
de configuración oval, la que se disemina luego distinguir- las de los embolismos cerebrales, en los
mediante disección del tejido nervioso y aumenta que son me- nos frecuentes.
de volumen para desplazar y comprimir al parén- Las hemorragias del putamen y el centro oval
quima adyacente. Es frecuente que se produzca des- constituyen el 50 % de las hipertensivas intracere-
pués edema del tejido comprimido, lo que ocasiona brales. Habitualmente el enfermo ha tenido pródro-
un incremento del efecto de masa, con empeoramien- mos en las horas o días precedentes al accidente:
to del estado clínico. vértigos, zumbido de oídos, cefalea, somnolencia,
Una causa común de hemorragia parenquimatosa cambios de carácter, parestesias, etc.
la constituyen los aneurismas de Charcot y Bouchard, Casi siempre el paciente está despierto y de súbi-
to cae en estado de coma, con la facies vultuosa,

400
congestionada y resolución muscular completa. A los antecedentes patológicos personales para definir
las pocas horas ya se detectan signos de deficiencia la posible causa, sobre todo HTA, trastornos hema-
motora hemilateral y desviación conjugada de la ca- tológicos, tratamiento anticoagulante, etc.; forma
beza y los ojos hacia el lado de la lesión cerebral. de comienzo y signos neurológicos útiles para
En ocasiones el cuadro se instala en pocos minu- el diagnóstico topográfico según el cuadro clínico
tos, a veces en 1 o 2 h y la toma de la conciencia es des- crito.
parcial. Los trastornos esfinterianos son casi cons- Las técnicas de neuroimagen han revolucionado
tantes, del tipo de incontinencia. En ocasiones se el diagnóstico al respecto.
presentan convulsiones tonicoclónicas generalizadas Tomografía axial computadorizada. Permite
o localizadas. El cuadro puede evolucionar en po- iden- tificar desde los inicios del ataque la
cas horas hacia la muerte o estabilizarse en 3 a 5 hemorragia (a diferencia de las lesiones isquémicas
días, después que cede el sangramiento y el edema que en las pri- meras 48 a 72 h suelen ser
cerebral acompañante. En este caso el enfermo en- negativas), así como pre- cisar la localización y
tra en una fase lenta de recuperación. extensión del hematoma. Este examen se debe
La hemorragia que ocurre en el tálamo óptico se practicar de urgencia cuando el pa- ciente debuta
caracteriza por ser de poca cuantía, cursa con ligera con la enfermedad, para definir la con- ducta
toma de la conciencia y produce una hemiparesia terapéutica.
discreta y un síndrome sensitivo característico. Rara Resonancia magnética nuclear. Es un método
vez se presenta un síndrome de Parinaud (parálisis tam- bién muy útil, que sobre todo en las
de los movimientos oculares hacia arriba, sin pará-
pequeñas he- morragias lobares permite hacer
lisis de convergencia).
el diagnóstico diferencial con el embolismo
Las pupilas a veces son anisocóricas y hay ausen-
cerebral. Cuando las lesiones son de menos de 1
cia del reflejo fotomotor.
cm de diámetro, no es fácil distinguirlas con la
En la hemorragia protuberancial se observan sig-
TAC, lo que sí se logra con la RMN.
nos de lesión piramidal bilateral y parálisis de pares
craneales (V,VII, VIII, etc.), rigidez de descerebra- Las imágenes del flujo sanguíneo en la RMN
ción y miosis con reflejo fotomotor conservado. Si per- miten identificar la presencia de
el enfermo sobrevive, a veces aparece un síndrome malformaciones arteriovenosas como causa de la
de Foville. hemorragia.
En la hemorragia cerebelosa al comienzo no hay Angiografía cerebral. Se efectúa para buscar infor-
toma de la conciencia y los vómitos son frecuentes mación cuando no está clara la causa de la
y repetidos; la cefalea es intensa y de localización hemorra- gia, así como cuando se va a realizar
occipital. Suele observarse nistagmo y el paciente tratamiento quirúrgico y no se dispone de
aqueja vértigos. Las pupilas son mióticas y el refle- flujometría por RMN, puesto que hay que tratar
jo fotomotor está presente. primero la malformación
Las hemorragias no hipertensivas tienen un co- (clipaje, embolización, etc.) antes de evacuar el hema-
mienzo súbito, pero por ser pequeñas ocasionan un toma.
síndrome clínico restringido, similar al del embolismo Punción lumbar. Implica riesgo cuando hay HC
cerebral, que topográficamente puede ser: occipital: por el peligro de hipertensión intracraneal, por lo
presenta hemianopsia; temporal izquierda: afasia y que se recomienda no practicarla si es posible dis-
delirio; parietal: alteraciones sensitivas, y frontal: de- poner de alguna técnica de neuroimagen. Cuando
bilidad del miembro superior. Por lo general estos se realiza, el LCR es claro o xantocrómico, con
pacientes se mantienen conscientes y se quejan de hiper- tensión variable según la magnitud del
una cefalea focal que tiene valor localizador de la hematoma y edema cerebral acompañante. Se debe
lesión. efectuar siem- pre bajo control de manometría.
El diagnóstico diferencial con la EC a veces es
Diagnóstico difícil, aunque los antecedentes (foco embolígeno
Para el diagnóstico es importante hacer una buena en la embolia y de HTA o trastornos de la coagula-
anamnesis y examen físico, que permitan precisar ción en las hemorragias), la evolución clínica de los
signos neurológicos (regresiva en la embolia y pro-
gresiva en la hemorragia), los síntomas
acompañan- tes como: cefalea, vómitos,
convulsiones, más
401
frecuentes en la hemorragia que en la embolia, per- • Hipertensión arterial.
miten sospechar lo que confirman las técnicas de • Diabetes mellitus.
neuroimagen antes descritas (TAC y RMN). • Insuficiencia cardíaca.
Evolución y pronóstico • Insuficiencia renal.
Las primeras 72 h de una HC son críticas para la 3. Otras: como consecuencia de instrumenta-
vida del paciente, ya que la violenta agresión al sis- ciones para diagnóstico o tratamiento
tema nervioso es capaz de producirle la muerte sin (ejem- plo, neumotórax por un abordaje
que pueda hacerse nada para evitarlo, pues la hiper- venoso profundo).
tensión intracraneal es capaz de lesionar los centros
vitales. En las primeras semanas posteriores a la he- Tratamiento
morragia sobrevienen complicaciones que muchas Profilaxis
veces modifican la evolución y agravan al enfermo. Estudios epidemiológicos han demostrado que existe
La localización y tamaño de una HC tienen valor una relación directa entre HC e HTA (la mortalidad
pronóstico; son muy graves las de la protuberancia, por HC es un marcador epidemiológico de control
el cerebelo y las putaminocapsulares. El estado de de la presión arterial), por lo que mantener contro-
conciencia a las 24 h de producido el accidente tiene lado a los pacientes hipertensos es la única profi-
valor pronóstico, pues se ha observado que cuanto laxis verdadera y efectiva de esta enfermedad.
más consciente esté el enfermo, mayor oportunidad
de recuperación tiene.
Tratamiento del accidente constituido
Complicaciones Se tomarán todas las medidas generales señaladas
en el epígrafe de TC. El edema cerebral será
I. Complicaciones neurológicas. tratado con diuréticos osmóticos del tipo del manitol
1. Hipertensión intracraneal. al 20 %, a razón de 0,25 a 0,50 g/kg de peso/dosis,
2. Nuevo sangramiento. fraccio- nado cada 4 h. En la medida en que el
3. Vasospasmo. paciente me- jore la conciencia y los signos de
4. Trastornos hipotalámicos.
edema cerebral, se reduce progresivamente
a) Arritmias cardíacas.
espaciando la dosis para evitar el fenómeno de
b) Secreción inadecuada de hormona anti-
rebote.
diurética.
Se debe tratar la HTA acompañante, que incre-
II. Complicaciones no neurológicas.
menta el riesgo de nuevo sangramiento, así como el
1. Infecciosas.
peligro de aumentar el edema cerebral. En el enfer-
a) Bronconeumonías.
b) Úlceras isquémicas de apoyo (escaras). mo previamente hipertenso se puede ser tolerante,
c) Infección urinaria. pero en el que no lo es, cuando está descontrolado,
d) Flebitis. hay que disminuir la presión. Es recomendable el
e) Infecciones orales. descenso del 25 % de las cifras iniciales de presión
f) Queratoconjuntivitis. arterial media.
g) Septicemia. Sin embargo, la reducción excesiva de la presión
2. No infecciosas. sanguínea puede crear más daños que beneficios,
a) Broncoaspiración. por lo que Greenlee recomienda no bajar más del
b) Trombosis venosa profunda. c) 25 % de inmediato en 1 o 2 h y mantener niveles
Tromboembolismo pulmonar. d) de pre- sión diastólica entre 100 y 110 mmHg, con
Íleo adinámico. reduc- ción a niveles de normotensión luego en 2 o
e) Sangramiento digestivo alto. 3 días. Cuando hay elevación significativa de la
f) Retención urinaria. presión arterial, se deben usar drogas EV
g) Desequilibrio hidromineral y acidobásico. (cumpliendo lo
h) Luxaciones articulares. explicado antes); son de elección:
i) Enfermedades previas descompensadas.
• Nitroprusiato de sodio (50 mg disueltos en 250 ml
de dextrosa al 5 %). Dosis inicial de 0,5 mg/
kg/min, sin excederse de 10 mg/kg/min.
402
• Labetalol. Dosis inicial de 10 mg; luego, de 20
a 80 mg cada 10 min sin pasar de 300 mg como Hemorragia
dosis total. De forma alternativa, 2 mg/min
cuando hay HTA maligna sostenida.
cerebromeníngea
La hemorragia cerebromeníngea generalmente se
Anticálcicos: Se recomiendan como drogas de ve en pacientes hipertensos, que debutan con
mantenimiento, por su período de acción prolongado, síntomas y signos de una hemorragia
las dihidropiridinas del tipo de amlodipino: 5 a 10 intraparenquimatosa, y elementos de afectación
mg al día; nicardipino: 20 a 30 mg 2 o 3 veces al meníngea o ventricular. Otras veces hay toma
día; nitrendipino: 10 mg al día; lacidipino: 2 a 4 mg parenquimatosa, que empeora y luego aparecen
al día; felodipino: 5 a 10 mg al día; nifedipino: 10 mg signos de daño ventricular o me- níngeo.
3 o 4 veces al día (si no es de acción retardada), y Desde el punto de vista epidemiológico, se ha
diltiazem: en dosis única de 180 mg diarios (si es de demostrado que es mucho más frecuente entre los
acción retardada) o 60 mg 3 veces al día, al que se le hipertensos (80 a 90 % de los casos tienen HTA
atribuye efecto neuroprotector, además de hipo- pre- viamente) y tiene una mortalidad muy
tensor. superior a todas las otras formas de enfermedad
Se pueden aplicar todas las medidas de neuropro- cerebrovascu- lar (70 % de letalidad); constituye la
tección descritas en la TC con medicamentos causa de muer- te cerebrovascular con más
neuroprotectores o métodos físicos, como hipoter- mortalidad precoz y pérdida de años de vida
mia e hipocapnia hasta 25 mmHg de PCO2. potencial y laboral, y se ha demostrado que estos
Igualmente, Greenlee recomienda el uso de feni- enfermos son mucho más pro- pensos a contraer
toína como profiláctico de las convulsiones y arrit- infecciones nosocomiales que los que padecen de
mias cardíacas, en dosis que mantenga una otras formas de hemorragia intra- craneal.
concentración plasmática de 10 a 20 mg/ml. De for- El cuadro clínico generalmente comienza de for-
ma práctica utilizamos entre 200 y 600 mg, fraccio- ma brusca, casi siempre en el curso de una crisis
nados en 3 dosis diarias. hipertensiva o de una HTA descontrolada desde va-
El edema cerebral que se desarrolla debe tratarse rios días antes y, en ocasiones, en el debut clínico
con energía y en ocasiones hay que hacer trepana- de una hipertensión rebelde a la terapéutica, con
ciones. cefa- lea y pérdida brusca del conocimiento; la
sangre ex- travasada se labra camino hacia los
Tratamiento quirúrgico ventrículos, y si es masiva la inundación ventricular,
Se hará tratamiento quirúrgico en circunstancias ta- el cuadro clínico se caracteriza por profundización
les como: del coma, hiper- termia (40 a 42 ºC), arritmia
cardíaca y respiratoria, y desviación de los ojos
a) Hemorragia cerebelosa.
hacia el lado contrario de la lesión cerebral, con
b) Hemorragias que se comportan como un pro-
contractura tónica de los miem- bros, el tronco y la
ceso expansivo intracraneal.
nuca (rigidez de descerebración). Puede ser
c) Hemorragias que producen signos localizados
también que se limite a la aparición de un síndrome
(afasia, hemianopsia, etc.).
meníngeo sumado al cuadro inicial, y esto se debe
d) Pacientes con estupor o coma con hemorragias
a la extensión del proceso hemorrágico al espacio
lobares que no responden rápidamente al trata-
subaracnoideo (sin inundación ventricu- lar); en
miento médico.
este caso tiene mejor pronóstico que cuando
La cirugía estereotáxica con mínimo acceso ha inunda los ventrículos.
Otras veces el proceso ocurre a la inversa: una
disminuido los riesgos quirúrgicos. Siempre se debe
hemorragia subaracnoidea o intraventricular masi-
hacer una angiografía previa al tratamiento quirúr-
va irrumpe en el parénquima cerebral (poco
gico y, si existe un aneurisma como causa de la he-
frecuen- te), lo que comporta un mal pronóstico, ya
morragia, se debe presillar (clipping) éste antes de
que por lo general el enfermo fallece en poco
evacuar el hematoma.
tiempo. Lo que caracteriza su cuadro clínico es la
mezcla de signos neurológicos focales (defecto
motor, sensitivo,
403
sensorial, pares craneales, etc.), con signos menín- mentalmente los primeros, constituyen la causa
geos (que son más o menos evidentes según el gra- más frecuente de HSA no traumática. En estudios
do de coma y resolución muscular). Algunos autores de au- topsia se ha calculado que hasta un 5 % de la
consideran esta entidad como hemorragia intraven- pobla- ción general presenta aneurismas
tricular secundaria. El LCR es francamente he- intracraneales. Le siguen en frecuencia la HTA y
morrágico. la arteriosclerosis. Los angiomas o
malformaciones arteriovenosas
Hemorragia
intraventricular primaria
Se denomina así al cuadro clínico que resulta de un
sangramiento que ocurre inicialmente en el sistema
ventricular o en la capa subependimaria subyacen-
te, incluidos aquellos que se producen hasta 1 y 1,5
cm de la pared del ventrículo.
Esto obedece a múltiples causas, como todas las
formas de hemorragia intracraneal, pero casi siem-
pre la HTA aparece como factor predisponente.
Clínicamente se manifiesta por un comienzo re-
pentino con cefalea, náuseas, vómitos, trastornos de
la conciencia (varían de la confusión al coma pro-
fundo); puede haber rigidez de nuca, anomalías
pupilares, temblor, hipertermia y poliuria con glu-
cosuria. Si el sangramiento es masivo, se produce la
Fig. 39.3. Angio carotídeo lateral. Aneurisma gigante a nivel
rigidez de descerebración. El pronóstico es muy de la bifurcación de la arteria carótida interna.
malo, pues tienen una alta letalidad.
HEMORRAGIA
SUBARACNOIDEA
Concepto
Es el cuadro clínico que se produce por la extrava-
sación de sangre en el espacio subaracnoideo.
Etiología
Esta variedad de ECV es frecuente y se calcula que 1
de cada 100 000 habitantes por año en una pobla-
ción aqueja una hemorragia subaracnoidea (HSA).
Tiene mayor incidencia en el hombre que en la mu-
jer y predomina en personas jóvenes menores de 50
años de edad. Reiteradamente se descubre un factor
desencadenante como: coito, esfuerzos bruscos,
emociones intensas, estreñimiento, exposiciones pro-
longadas al sol, crisis hipertensivas, etc.
Los aneurismas arteriales encefálicos, (Figs. 39.3,
39.4 y 39.5) congénitos o adquiridos, pero funda-

Fig. 39.4. Angio carotídeo. Vista anteroposterior. Se observa


un aneurisma gigante en la bifurcación de la arteria carótida
interna.
404
congénitas (Fig. 39.6) son una causa importante de
HSA. Los tumores cerebrales, sobre todo el glio-
blastoma multiforme, a veces se manifiestan por un
accidente hemorrágico meníngeo. Los traumatismos
craneoencefálicos producen HSA, quizás con más
frecuencia de lo que se diagnostica.
Las discrasias sanguíneas, que cursan con tras-
tornos hemorrágicos y de la coagulación, son causa
ocasional de hemorragia meníngea, casi siempre
mortal. Con alguna frecuencia no se encuentra el
motivo de la hemorragia. Se habla entonces de
HSA idiopática.

Cuadro clínico
En algunos pacientes existe el antecedente de cefa-
leas crónicas de localización diversa, pero por lo
general son unilaterales, pulsátiles y con
proyección monocular. La HTA es más frecuente
en estos en- fermos que en la población general.
El proceso se instala de forma súbita, con cefalea
brutal y sensación de estallido en la cabeza. Hay
Fig. 39.5. Angio carotídeo lateral. Aneurisma de la arteria co- vértigos y pérdida del conocimiento. Si el aneuris-
municante posterior. Se observan dos aneurismas más, uno en ma y la arteria rota son de gran calibre, habrá coma
el territorio de la arteria cerebral anterior y otro en el de la profundo, ritmo respiratorio de Biot, signos de des-
comunicante posterior.
cerebración, paro cardiorrespiratorio y muerte.
Toda esa rápida y fatal evolución se debe a la
enor- me hipertensión intracraneal que se produce a
causa de la gran cantidad de sangre que pasa al
espacio subaracnoideo. Cuando lo que ocurre es
el fisura- miento aneurismático o la ruptura de una
arteria de poco calibre o arteriola, a la pérdida
inicial del co- nocimiento sigue la recuperación de
la conciencia en un período de tiempo variable. El
estado de estu- por suele durar varios días y la
cefalea es general- mente constante e intensa. El
paciente se muestra irritable y aquejan fotofobia.
Con frecuencia hay un estado febril que dura varios
días.
La rigidez de la nuca está presente casi de forma
constante y es de grado variable, desde muy intensa
y acompañada de todos los signos de irritación me-
níngea hasta poco aparente, puesta sólo en eviden-
cia mediante la maniobra de Lewinson. Puede
haber un signo de Babinski bilateral y
aproximadamente en el 20 % de los casos
hemiplejía, afasia u otro déficit focal, causados
por una de las 3 posibilida- des siguientes:
Fig. 39.6. Angio carotídeo lateral. Fístula arteriovenosa. Nóte- 1. Espasmo y obstrucción arterial como respues-
se el gran ovillo vascular con un grueso vaso eferente que drena ta vascular a la presencia de sangre en el espa-
en los senos venosos profundos.
cio subaracnoideo. Es de observación frecuente
405
alrededor del séptimo día de evolución y pue- precisarse el aneurisma o angioma causante del ac-
de causar infarto cerebral. cidente.
2. Invasión de la sustancia nerviosa por la sangre Punción lumbar. Ha pasado a un segundo plano
del espacio subaracnoideo. como elemento diagnóstico. Si la TAC es conclu-
3. Hemorragia cerebromeníngea. yente, no se hace PL. Si la TAC no es concluyente
o no es posible hacerla, o la clínica es muy
La HSA a veces comienza con agitación psico- sugerente de HSA con TAC negativa, entonces se
motora aguda, convulsiones, etc. En el fondo de ojo realiza la PL, teniendo en cuenta que para
se observan hemorragias retinianas o subhialoideas, eliminar un error diagnóstico se hace la prueba de
especialmente en caso de aneurismas rotos de loca- los 3 vasos, que debe mantener la misma
lización anterior. intensidad o el conteo de hematíes ser igual en
Se han visto casos (sobre todo consecutivos a HTA cada vaso si es una HSA, pero si disminuye del
descontrolada) que tienen cefalea pertinaz por más primero al tercero, entonces se pien- sa en la causa
de 24 h, que se mantiene en cualquier posición o traumática. La muestra se centrifuga y el líquido
circunstancia, y al hacer una punción lumbar ha re- sobrenadante debe ser xantocrómico. En el análisis
sultado ser una HSA. Generalmente evolucionan citoquímico hay pleocitosis y hematíes normales
bien, sin complicaciones. y crenados; a veces se encuentra hiper-
La fase de estado de la enfermedad se caracteriza proteinorraquia, y los cloruros y la glucosa son
por 3 tipos de síndromes: normales.
Angiografía cerebral. Es el examen fundamental
a) Síndrome de hipertensión intracraneal, con ce- para diagnosticar la causa de la HSA, el cual se
falea, vómitos en “proyectil”, papiledema y es- debe hacer lo más pronto posible después de la
tupor alternando con agitación. hemorra- gia, en dependencia del estado clínico del
b) Síndrome meníngeo, dado por rigidez de nuca, paciente. Esto puede demostrar el aneurisma,
signo de Kernig, Brudzinski y otros signos angioma u otra causa, así como precisar la
meníngeos, hiperestesia cutánea, abolición de localización, tamaño, forma, arterias que
los reflejos cutaneoabdominales, Babinski bi- involucra, etc. Se prefiere la téc- nica convencional
lateral, y en los miembros inferiores, reflejo de y se realiza en los cuatro vasos
triple retirada.
(carótidas y vertebrales).
c) Síndrome vegetativo, dado por: elevación tar- Resonancia magnética nuclear. Aunque la TAC
día de la temperatura (38 o 39ºC), bradicardia detecta mejor la sangre en el espacio subaracnoideo
o taquicardia, arritmias, estreñimiento, sudo- en las primeras 48 h, la RMN tiene valor para diag-
ración y aceleración del ritmo respiratorio. nosticar aneurismas y malformaciones pequeñas, así
como infartos por vasospasmo.
Diagnóstico Doppler transcraneal. Es útil, permite identificar
Ante un paciente que presente un cuadro de cefalea la magnitud del sangramiento, el territorio vascular
intensa, sobre todo si es de comienzo brusco, con dañado y diagnosticar un espasmo vascular como
signos meníngeos y algunos de los otros descritos, complicación de la HSA.
es altamente sospechosa la posibilidad de HSA, y Electrocardiograma. Se detectan arritmias, bra-
para comprobarla se realizan los siguientes estudios: dicardia y taquicardia (signos vegetativos) o patro-
Tomografía axial computadorizada. Constituye la nes similares a la cardiopatía isquémica con onda T
primera prueba que se hace para el diagnóstico; es invertida y segmento ST supradesnivelado.
muy útil cuando se practica dentro de las 48 h si-
guientes a la ocurrencia del sangramiento (fuera de Diagnóstico topográfico.
este término suele disminuir su positividad), com- La causa más frecuente de HSA es el aneurisma ar-
prueba la presencia de sangre en el espacio subarac- terial. La localización definitiva se obtiene por me-
noideo, la cuantía y localización del sangramiento, dio de los estudios angiográficos; sin embargo,
si se extiende a los ventrículos o espacio intraparen- desde el punto de vista clínico es posible obtener
quimatoso, si se produce infarto por vasospasmo o una orien- tación bastante adecuada, ya que a
hidrocefalia como complicación, y hasta puede menudo produ- cen síntomas particulares de
acuerdo con su localización. Se mencionarán los
correspondientes a las localizaciones más comunes.
406
Aneurisma del tronco de la arteria carótida
interna.Constituye un porcentaje considerable de los
aneurismas intracraneales. Se desarrolla en el tra-
yecto de la arteria carótida interna, desde su entrada
en la cavidad craneal hasta la emergencia de la co-
municante posterior. En este tramo la arteria carótida
interna tiene estrechas relaciones con el seno caver-
noso. Un aneurisma desarrollado en ese sitio se ma-
nifiesta principalmente por oftalmoplejía a causa de
la compresión de los nervios oculomotores, y
exoftalmos por comprometerse el drenaje de las ve-
nas oftálmicas. Cuando hay fisuramiento puede de-
sarrollarse una fístula carotidocavernosa, con soplo
sistólico sobre el globo ocular y exoftalmos pulsátil.
Aneurisma del polígono de Willis. Casi la mitad de
los aneurismas intracraneales se desarrollan en el
polígono de Willis, y la mayoría son congénitos. Los Fig. 39.7 b) Al levantar el párpado superior izquierdo a la pa-
ciente, se observa que el globo ocular de ese lado está desvia-
que se forman a expensas de la comunicante poste- do hacia afuera (acción del músculo recto externo) a causa de
rior, con alguna frecuencia producen crisis de mi- la parálisis del recto interno.
graña oftalmopléjica: cefalea en hemicránea y
retrocular con parálisis del III par (Figs. 39.7 a, 39.7 b
y 39.7 c).
Los aneurismas que se originan en la arteria ce-
rebral anterior son comunes y suelen alcanzar ta-
maño considerable. A veces se sitúan entre ambos
lóbulos frontales (en la arteria comunicante ante-
rior) y su fisuración se expresa por convulsiones y
hemiplejía de predominio crural, con mutismo
acinético y abulia.
La instalación de una ceguera unilateral corres-
ponde en ocasiones a un aneurisma desarrollado en

Fig. 39.7 c) Al ordenar a la paciente que mire hacia la


derecha, se observa que el globo ocular izquierdo no puede
desviarse hacia ese lado, debido a la parálisis del músculo
recto interno.

la bifurcación de la arteria carótida interna en el


origen de la arteria oftálmica o en la comunicante
anterior. La vecindad del quiasma óptico lo hace
vul- nerable y puede ocurrir defecto del campo
visual, disminución de la agudeza visual, etc.,
hasta llegar a la atrofia óptica.
Fig. 39.7 a) Parálisis del III par craneal producida por un aneu-
risma del polígono de Willis. Nótese la ptosis palpebral iz- Los aneurismas de la arteria cerebral media
quierda. pro- ducen hemiparesia y afasia, y a veces
convulsiones; generalmente se situán en la
bifurcación de esta ar- teria.
407
Pronóstico Tratamiento
Luego del surgimiento de las técnicas de neuroima- El paciente, aunque no tenga gran toma de la con-
gen, ha mejorado el pronóstico. Antes se planteaba ciencia, está grave. Se debe mantener en reposo,
que el 50 % de los casos de HSA fallecían; hoy se acostado en posición horizontal, la habitación en
sabe que la letalidad es menor cuando se actúa con penumbra y libre de ruidos; se cumplirán todos los
rapidez en el diagnóstico y tratamiento. En un estu- cuidados cuando exista toma de la conciencia (ver
dio en nuestro hospital, la letalidad fue de 35,9 %, laepígrafe “Trombosis cerebral”).
más baja de todas las ECV hemorrágicas. Cuando la Se debe evitar todo lo que sea capaz de provocar
causa que la produce es un aneurisma, el peligro de un nuevo sangramiento, como: vómitos,
nuevo sangramiento y muerte es mayor. Las dos estreñimien- to (esfuerzo al defecar), hipo, tos
complicaciones neurológicas frecuentes que ensom- intensa, así como los esfuerzos físicos. Si se
brecen el pronóstico (vasospasmo e hidrocefalia), presentan estos síntomas, hay que tratarlos.
se presentan sobre todo en las hemorragias más cuan- El tratamiento y la profilaxis de las convulsiones
tiosas y empeoran el pronóstico. son iguales que en la hemorragia intraparenquima-
El resto de las complicaciones (ver “Hemorragia tosa; si la cefalea es muy intensa, se deben usar
cerebral”) también modifican de forma negativa la anal- gésicos: Espasmoforte disuelto en 20 ml de
evolución de los pacientes. dextrosa al 5 % EV, lento, 3 o 4 veces al día, o
Se conoce que el espasmo ocurre más frecuente- meperidina
mente entre el 4º y 14º días; la repetición del san- (Demerol), 50 a 100 mg por vía IM, que se pueden
gramiento, entre el 70 y 210 días, y la hidrocefalia repetir cada 4 o 6 h. También se hacen punciones
puede ser aguda en los primeros días o tardía al cabo lumbares repetidas con extracción de 15 a 20 ml
de semanas o meses de haberse presentado la he- de LCR, aunque éste es un recurso al que casi
morragia. nunca se tiene que recurrir.
Las HSA idiopáticas e hipertensivas evolucionan En caso de arritmia respiratoria, se administra
mejor que las causadas por aneurismas, angiomas y aminofilina, 250 mg disueltos en 20 ml de dextrosa
hemopatías. al 5 % EV, lento, a pasar en 20 min cada 8 o 12 h.
El síntoma que considerado aislado tiene mayor Los trastornos del ritmo cardíaco se tratan con
valor pronóstico es el estado de conciencia, pues digitálicos o anticálcicos del tipo del diltiazem o
aquél será peor cuanto mayor toma de conciencia ve- rapamilo, según se presenten y en la dosis
exista y viceversa. No obstante, la clasificación recomen-
pronóstica clínica de Hunt y Hess tiene utilidad. dada para cada uno.
Una grave complicación la constituye el vasos-
Grado I: • Asintomático o cefalea moderada. pasmo con infarto cerebral, para lo que se deben
Grado II: • Cefalea moderada o severa. usar desde el principio los anticálcicos, pues de
• Rigidez de nuca. todas las ECV, aquí es donde parecen ser más
• Parálisis oculomotora. efectivos. El más útil es el nimodipino de 30 mg, a
Grado III: • Confuso, somnoliento. razón de 1 ta- bleta cada 4 h (se pueden emplear
• Ligeros signos de focalización neu- 60 mg/dosis la primera semana).
rológica. Si existe HTA, hay que tratarla siempre para re-
Grado IV: • Estupor. ducir sus cifras usando las formas descritas en la
• Hemiparesia. “Hemorragia intraparenquimatosa”.
Grado V: • Coma profundo. El empleo del ácido epsilón-aminocaproico
• Rigidez de descerebración. como antifibrinolítico ha perdido adeptos, puesto
que no ha producido los resultados esperados; ya
La mortalidad en los pacientes con grado I y II sólo se recomienda cuando existen hemorragias
es mínima, inferior al 5 %, y muy alta en los grados 4 importan- tes causadas por rupturas de aneurismas
y 5; en el último es de 100 %. con gran- des riesgos de nuevo sangramiento, a
razón de 4 g EV cada 4 o 6 h.
En los pacientes en que se asocia agitación
psico- motora, se ha usado con muy buenos
resultados la
408
cloropromacina, a razón de 25 mg cada 6 u 8 h por Se excluyen de esta categoría a los pacientes
vía IM u oral, lo que además potencializa el efecto por- tadores de epilepsia o traumatismos
de los hipotensores y posee una ligera acción craneoencefáli- cos con cuadro clínico semejante.
antiedema cerebral. En los casos severos se admi- La causa no se conoce, pero parece tener
nistra asociada a la lidocaína y dextrosa al 10 % por relación con procesos vasculares, incluida la
vía EV controlada (efecto descompresivo de Cossa). migraña.
Si se demuestra por los estudios complementa- rios Clínicamente se caracteriza por un trastorno
la presencia de aneurismas, angiomas u otra causa mar- cado de la memoria anterógrada y amnesia
que requiera tratamiento quirúrgico, es una retrógra- da, para las caras, sucesos famosos y la
facultad del cirujano esta decisión. memoria autobiográfica; suele haber cefalea,
OTRAS FORMAS náuseas, vómi- tos y falta de concentración con
examen físico nor- mal. El cuadro puede ser
DE ENFERMEDAD precipitado por el ejercicio físico y el stress.
El diagnóstico clínico y los exámenes
CEREBROVASCULAR complemen- tarios por neuroimágenes sólo son
útiles para des- cartar otras causas. Tiene buen
Enfermedad de Moya- Demencia vascular
pronóstico.
Moya o demencia multinfarto
Es una arteriopatía que se caracteriza por un estre-
chamiento u oclusión de los troncos arteriales Se considera como tal a todo cuadro que curse con
supraórticos y la presencia de numerosos vasos de deterioro global de las funciones intelectuales y
pequeño calibre que se originan en el polígono de que sea provocado por lesiones en el parénquima
Willis, así como la existencia de pequeñas arterias y cere- bral secundarias a alteraciones vasculares. Es
venas indiferenciadas, tanto en el espacio subarac- la se- gunda causa de demencia y se asocia a otras
noideo como en el parénquima cerebral. en las llamadas demencias mixtas.
Es más frecuente en adultos jóvenes y en muje- Se ve fundamentalmente en pacientes ancianos,
res. Se consideraba propia de los asiáticos, pero ya mayores de 60 años, que han sufrido isquemias e
se ha reportado en muchas otras razas; en ocasiones infartos cerebrales por ECV. Hay casos en que
cursa con epilepsia. estas afecciones vasculares preceden con toda su
El diagnóstico se hace casi exclusivamente por expre- sión clínica a la demencia en el curso de
angiografía, en la que se constatan las oclusiones o la ECV, pero en otros la enfermedad vascular no se
estenosis en un vaso del polígono y las redes de va- expresa y se encuentra en los estudios de
sos anormales (imagen en “bocanada de humo”), con neuroimágenes al buscar la causa de la demencia.
anastomosis transdurales, de forma simétrica. Desde el punto de vista anatómico, siempre hay
En la actualidad existe una teoría que plantea su pérdida de neuronas, a consecuencia de infartos
origen a partir de una oclusión vascular en la base múltiples u otra lesión vascular. Topográficamente,
del cráneo y la apertura de numerosas vías colatera- las lesiones talámicas, temporales, parietales y del
les simétricas. cuerpo calloso producen con más frecuencia que
otras, cuadros demenciales.
Desde el punto de vista clínico es común su aso-
Amnesia global transitoria ciación con los síndromes vasculares cerebrales. Hay
Consiste en una pérdida brusca de la memoria signos de demencia y un carácter irritable, labilidad
anterógrada, caracterizada por incapacidad para asi- emocional y lentitud en las respuestas; la amnesia
milar nuevas informaciones, preguntas reiteradas, y no es tan marcada como en la enfermedad de
ausencia de otros signos y síntomas neurológicos, Alzheimer y, sobre todo, conservan más tiempo la
todo lo cual se resuelve en menos de 24 horas. memoria retrógrada; se altera la articulación y me-
lodía del lenguaje.
El diagnóstico es eminentemente clínico y se basa
en la existencia del cuadro cerebrovascular, las
409
alteraciones del examen neuropsicológico y las ex- Hematoma subdural. Esta afección será siempre
ploraciones por neuroimágenes que evidencian difícil de diagnosticar si no se piensa en ella. Cuan-
localización y tamaño de las lesiones cerebrovascu- do existe el antecedente de un traumatismo craneo-
lares. encefálico, las posibilidades de un diagnóstico
precoz salvador aumentan, pero debe recordarse
Diagnóstico diferencial de los que a esta enfermedad se le conoce también con el
accidentes vasculares encefálicos nombre de hematoma subdural espontáneo, porque
el trauma- tismo responsable ha sido leve y pasa
Todos los cuadros clínicos descritos tienen un perfil inadvertido para el propio enfermo. Además, éste
común que permite incluirlos en el grupo de los lla- generalmente tiene alteración de la conciencia y no
mados accidentes vasculares encefálicos y, al mismo coopera en el interrogatorio.
tiempo, diferenciarlos de otros procesos neurológi- En el hematoma subdural son muy
cos en los cuales el árbol vascular no está lesionado, características la cefalea, obnubilación y
al menos primariamente. hemiparesia ligera, sínto- mas que se han instalado
Las afecciones que en la patología neurológica se o desarrollado en varios días o semanas. De igual
confunden alguna que otra vez con un accidente forma resulta muy llamati- va la desproporción que
vascular encefálico, son tres principalmente: existe entre la alteración de la conciencia y la poca
• Tumor cerebral primario o secundario. intensidad de la parálisis, la que incluso falta en el
• Meningoencefalitis. 50 % de los casos.
Casi nunca hay papiledema, y existen signos
• Hematoma subdural.
como midriasis unilateral (con valor diagnóstico y
Tumor cerebral primario o secundario. Entre los locali- zador), fluctuación del estado de conciencia,
tumores cerebrales primarios, el glioblastoma multi- reflejo de prensión y cefalea, que son de gran valor
forme comienza con alguna frecuencia con un cuadro dignós- tico.
encefálico hemorrágico. Las metástasis cerebrales La TAC es de incalculable valor diagnóstico; en
remedan casi siempre a una trombosis cerebral, en su defecto se debe hacer una angiografía.
la que participan las vías o centros vestibulocerebe-
losos. Los tumores encefálicos, al crecer, pueden en-
globar u obstruir tanto las arterias como las venas TROMBOSIS DE LOS
por sufrir hemorragias intratumorales, y dar lugar a
cuadros que simulen un accidente vascular encefá- SENOS VENOSOS
lico. Para el diagnóstico diferencial se tendrá en
cuenta la existencia de cefalea con los caracteres de La patología venosa encefálica es uno de los
la que acompaña a la hipertensión intracraneal en capítu- los de la neurología, que por una serie de
los días y semanas previos, el antecedente de cam- circuns- tancias, todavía está pendiente de una
bios de la personalidad, la presencia de papiledema estructuración definitiva. Al contrario de las
en el examen del fondo de ojo y la existencia de una enfermedades arteria- les, cuyos problemas más
neoplasia en otro lugar de la economía (pulmón, importantes han sido re- sueltos, por lo menos en
melanoma, tiroides, mamas, riñon, etc.). cuanto a diagnóstico se refiere, la patología
Las técnicas de neuroimagen (TAC y RMN), así venosa ha quedado olvidada o relegada a un
como la gammagrafía cerebral, confirman el diag- segundo plano.
nóstico. Una causa probable del actual desconocimiento
Meningoencefalitis. Muy rara vez una infección de estas afecciones es lo poco que se piensa en
del encéfalo y sus cubiertas plantean el diagnóstico ellas. La mayor parte de los neurólogos e
diferencial con los accidentes vasculares encefálicos, internistas, ante todo proceso cerebral de causa
pues el cuadro toxinfeccioso con que evoluciona y oscura en el que se puede descartar un origen
las alteraciones del LCR son muy característicos. tumoral o arterial, tien- den a etiquetar el proceso
Las pruebas imagenológicas permiten el diagnósti- como una encefalitis vírica antes que pensar en una
co diferencial. flebitis cerebral.
Por lo dicho anteriormente, es de fuerza dejar al-
gunas lagunas en el desarrollo de este tema. La ra-
zón principal de presentarlo a los estudiantes y
410
médicos jóvenes es suscitar interés por este aspecto hacia atrás se continúa con los senos petroso supe-
de la patología cerebral, pues estamos seguros de rior, por medio de los cuales desagua en la vena
que en el futuro ocupará un papel mucho más im- yu- gular interna. Es de sumo interés clínico
portante que el que tiene asignado en la actualidad. resaltar las íntimas relaciones que tiene con
Anatomía de los senos venosos distintos pares cra- neales; así, el VI par craneal
atraviesa la cavidad del seno y por la pared externa
Los senos venosos son verdaderos repliegues de la de éste corren el III y IV pares y la rama oftálmica
duramadre, recubiertos por un endotelio vascular y del trigémino.
de forma especial protegidos contra las presiones que Los senos petrosos son dos: el superior, que
se originan en la cavidad craneana. Recogen la san- sigue el borde superior del peñasco en un repliegue
gre venosa del encéfalo procedente de las venas pro- de la duramadre del borde externo de la tienda del
piamente encefálicas y la llevan a las venas del cere- belo y que termina por su extremidad
cuello, de la superficie externa del cráneo y a las del posteroexterna en el seno lateral, y el inferior, que
diploe. Los más importantes son: el seno longitudi- va por el borde inferior del peñasco, desde el seno
nal superior, el longitudinal inferior, el recto, el la- cavernoso hasta el agujero rasgado posterior,
teral o transverso, el cavernoso y los senos petrosos. donde se une al seno lateral para formar la gran
El seno longitudinal superior está situado en el vena yugular interna.
borde superior de la hoz del cerebro y corre desde la
cresta frontal hasta la prensa de Herófilo, donde Concepto
desemboca. Recibe afluentes desde las caras inter-
La trombosis de los senos venosos (TSV) de la du-
na y externa de los hemiferios cerebrales y desde la
ramadre es un cuadro clinicopatológico producido
duramadre (venas meníngeas medias).
por la oclusión total o parcial de éstos, caracteriza-
El seno longitudinal inferior es mucho más pe-
do clínicamente por cefalea, edema de la papila,
queño que el superior y está asentado en un replie-
cuadro clínico focal, convulsiones, parálisis de pa-
gue del borde inferior de la hoz del cerebro. Recibe
res craneales y otras alteraciones, y desde el punto
afluentes desde la cara interna de ambos hemisfe-
de vista anatomopatológico, por infartos cerebrales
rios y del cuerpo calloso, es corto y desagua en el
con frecuencia hemorrágicos, que pueden ser múlti-
seno recto de la base de la hoz.
ples y estar situados en ambos hemisferios cere-
El seno recto es corto y ocupa un repliegue dural
brales.
de la base de implantación de la hoz del cerebro,
sobre la parte media de la tienda del cerebelo. Por Etiología y fisiopatología
su extremidad anterior recibe a la gran vena de Ga-
leno y por su extremidad posterior desagua en un Los factores asociados con la aparición de la TSV
punto de confluencia con el seno longitudinal supe- cerebrales son muchos; sin embargo, los más
rior, que recibe el nombre de prensa de Herófilo o comu- nes en los pacientes adultos son el uso de
torcular. anticon- ceptivos orales, el posparto y la
El seno lateral sale de la prensa de Herófilo y se enfermedad maligna sistémica; en los niños, la
dirige horizontalmente hacia afuera dentro de un re- otitis media y con menor frecuencia, la leucemia.
pliegue del borde convexo de la tienda del cerebelo, Se supone que en el 20 % de los casos no se logra
y al llegar a la cara interna de la apófisis mastoides, aclarar la causa.
se curva hacia abajo y adentro, hasta el agujero ras- Son tres los eventos fisiopatológicos cardinales
gado posterior, donde confluye también el seno identificados hasta el momento:
petroso inferior; de ahí continúan ambos hacia la a) Cambios en la pared del vaso (por infiltración
vena yugular interna. maligna o por un proceso inflamatorio secun-
El seno cavernoso está constituido por un replie- dario a infección).
gue de la duramadre, a ambos lados de la fosa b) Cambios en el flujo sanguíneo (policitemia,
pituitaria. Comunica hacia adelante con los plexos deshidratación o fallo cardíaco).
venosos de la órbita y hacia abajo con los plexos c) Alteraciones en la coagulación sanguínea
venosos de las fosas esfenopalatina y pterigomaxilar; (trombocitosis, deficiencia de antitrombina III,
CID y uso de anticonceptivos orales).

En el embarazo, la TSV a menudo se asocia a


trombosis pélvica. En las personas con enfermedades
411
malignas, esta afección puede resultar de leucosta- B. Cambios en la pared del vaso.
sis, infiltración de la pared de los vasos, un estado • Carcinoma.
de hipercoagulabilidad o una alteración de los fac- • Malformaciones arteriovenosas.
tores de la coagulación secundaria a la terapia con • Sarcoidosis.
asparginasa. • Leucemia.
En los pacientes con insuficiencia cardíaca, hay • Meningitis.
un aumento significativo de la presión venosa cen- • Otitis crónica.
tral, lo que disminuye la velocidad del flujo en los • Aspergilosis.
senos durales y en las venas intracerebrales; esto, • Mastoiditis.
por supuesto, incrementa el riesgo de TSV. • Lupus eritematoso diseminado.
Conviene mencionar, de modo especial, los me- • Traumatismos.
canismos fisiopatológicos hasta ahora involucrados C. Cambios en el flujo sanguíneo.
en la génesis de este trastorno en mujeres que están • Fallo cardíaco.
recibiendo anticonceptivos orales. En algunos estu- • Caquexia y marasmo.
dios se ha identificado un engrosamiento de la ínti- • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
ma en las venas y arterias de mujeres que emplean • Triquinosis.
anticonceptivos orales; igualmente se ha encontrado • Deshidratación.
aumento de la viscosisdad sanguínea después de 3 • Cardiopatías congénitas.
meses de su uso, e incremento de la volemia y del • Idiopática.
gasto cardíaco; todo ello tal vez secundario al efec-
to estrogénico. Otros estudios han descubierto au- Manifestaciones clínicas
mento en el recuento plaquetario, en los niveles de
La cefalea es el signo más importante por su fre-
factores VII, VIII, IX y X de la coagulación y del
cuencia (alrededor del 80 % de los casos) y por su
fibrinógeno, así como disminución de la actividad
precocidad. Se produce por irritación de estructuras
de la antitrombina III. Todos estos estados
sensibles al dolor, como los senos venosos, las ve-
protrombóticos conllevan a la trombosis venosa, que
nas corticales, las meninges o los pares craneales.
a su vez implica el incremento de la presión capilar
En ocasiones se debe a la hipertensión intracraneal,
con el consiguiente aumento del flujo sanguíneo
es difusa, de intensidad creciente, resistente al
cerebral, de la presión del líquido cefalorraquídeo,
trata- miento y puede ser más intensa por la
edema e infarto, que finalmente producen hiperten-
mañana. En los casos crónicos es a veces el único
sión intracraneal.
síntoma du- rante semanas o meses.
Causas de trombosis de los senos Las crisis convulsivas parciales o generalizadas
se presentan entre una tercera y dos terceras partes
venosos cerebrales de los casos y con frecuencia preceden a la apari-
A. Cambios en la composición sanguínea. ción de los signos neurológicos focales. El edema
• Deficiencia de antitrombina III. de la papila ocurre en un 50 % de los casos y hay
• Uso de anticonceptivos orales. trastornos mentales o de la conciencia en un 25 %;
• Colitis ulcerativa. pero las alteraciones de los pares craneales son
• Policitemia. poco comunes, salvo en la trombosis del seno
• Enfermedad de Crohn. cavernoso.
• Anemia hemolítica. El patrón clínico de la TSV se asemeja al de la
• Parto y puerperio. hipertensión intracraneal benigna, la isquemia tran-
• Leucemia. sitoria o el infarto cerebral de origen arterial, la en-
• Hemoglobinuria paroxística nocturna. cefalitis, un tumor o una hemorragia
• Carcinomatosis. subaracnoidea. Bouser distingue cuatro cuadros
• Trombocitosis idiopática. clíncos fundamen- tales: hipertensión intracraneal
• Síndrome nefrótico. aislada, signos focales cerebrales, síndrome del seno
• Coagulación intravascular diseminada. cavernoso y otras pre- sentaciones (combinación de
• Enfermedad de Behçet. las anteriores, o cefa- lea aislada, crisis aisladas,
trastornos mentales o, incluso, formas
asintomáticas).
412
La trombosis del seno longitudinal superior se ción inflamatoria o séptica en una región vecina al
manifiesta en un 50 % de los casos con un síndrome seno que se sospecha afectado.
de hipertensión intracraneal, con cefalea difusa y La TAC debe ser realizada precozmente y en ella
precoz, que se acompaña en ocasiones de un cuadro aparecen signos directos o indirectos de trombosis
focal con crisis y déficit motor o sensitivo, proba- venosa. El directo más conocido es el del delta va-
blemente en relación con la trombosis de venas cío y se observa en la tomografia con contraste;
corticales. Cuando se afectan los lóbulos paracen- con- siste en una falta de opacificación del tercio
trales, se produce una paraplejía de causa cerebral. posterior del seno longitudinal superior (en un 30
La trombosis del seno lateral es, con frecuencia, una
% de los casos no es visible en los primeros días) y
complicación de la otitis media aguda, con fie- bre y
suele des- aparecer al cabo de unos 2 meses. Entre
otorrea. En este caso la cefalea es retroauricular.
Puede observarse el signo de Griesinger, que con- los signos indirectos, el más demostrativo es la
siste en una ingurgitación de la vena emisaria presencia de infartos cerebrales, con frecuencia
mastoidea. múltiples y he- morrágicos, a veces simétricos
La trombosis del seno cavernoso se asocia de for- como alas de mari- posa; también está la
ma común a infecciones de las partes blandas de la hipercaptación del contraste por la hoz y el
tentorio, y el edema cerebral.
cara. Es clásica la consecutiva al furúnculo del labio
La angiografía cerebral (por sustracción digital)
superior o al ántrax de la nariz, y algunas veces se
era el único método certero de diagnóstico. Los
asocia a supuraciones dentales, de las amígdalas y
sig- nos más comunes son: fallo para visualizar
de los senos maxilares, etmoideos o esfenoidales.
todo o parte de un seno, ausencia de llenado de las
La cefalea es precoz en la región orbitaria y aumen-
venas corticales en una zona de déficit neurológico,
ta con la presión del globo ocular. Se acompaña de
venas
quemosis, edema palpebral y frontal, hiperemia “en sacacorchos” que no llegan a la corteza cere-
retiniana, exoftalmos, oftalmoplejía unilateral, que bral, desarrollo de colaterales y enlentecimiento
en algunos casos se hace bilateral, y afectación de la circulatorio difuso o focal.
rama oftálmica del V par (Fig. 39.8). La RMN es el procedimiento ideal para el diag-
Diagnóstico nóstico de la TSV. Es una técnica invasiva, con es-
El diagnóstico de la trombosis del seno longitudinal casas contraindicaciones, que informa tanto sobre
superior es muy difícil, es sencillo el del seno ca- el estado de los vasos venosos como sobre el
vernoso y no del todo fácil el del lateral. Son ele- parén- quima cerebral y determina la antigüedad del
mentos importantes la agudeza del comienzo y del trombo. Tiene una sensibilidad de más del 90 %
curso, los signos focales y la existencia de una afec- con respec- to a la arteriografía.
El examen del LCR descarta una meningitis en
los pacientes febriles o con un foco infeccioso previo.
Durante la maniobra de Queckenstedt se puede
sospechar una trombosis del seno lateral, pues en
este caso la presión del líquido no se eleva en el
lado de la trombosis, pero sí en el no afectado.

Pronóstico
Siempre es sombrío, con pocas esperanzas de cura-
ción. Son raras las curaciones espontáneas en la
trom- bosis de los senos longitudinal superior y
cavernoso, aunque no es imposible en la del seno
cavernoso. Desde luego, es gravísima la trombosis
séptica con bacteriemia. Antes que se produzca
Fig. 39.8. Paciente con una trombosis del seno cavernoso.
Nótese el gran edema de aspecto inflamatorio en el ojo septicemia, un enfermo con una trombosis del
derecho. seno lateral puede curar si se liga la yugular
interna; de lo contrario, la muerte es inevitable.
Con frecuencia, una meningo- encefalitis pone fin a
estos procesos.
413
Tratamiento Clasificación
Los anticoagulantes son los medicamentos de elec- La clasificación de las malformaciones
ción para el tratamiento de la TSV cerebrales y se arterioveno- sas (MAV) es compleja, ya que suele
deben administrar incluso en la tromboflebitis de contemplar as- pectos tan diversos como la
origen infeccioso (para el tratamiento anticoagulan- etiología, dimensión, hallazgos angiográficos,
te véase el capítulo “Enfermedad tromboembólica riesgo de morbimortalidad quirúrgica, etc.
venosa”). Debe tenerse gran precaución con su uso Según la causa. Etiológicamente, las MAV se
en estos pacientes, ya que la mayoría tienen asocia- cla- sifican en congénitas y adquiridas. Las
dos infartos hemorrágicos que aumentan de forma congénitas pueden ser familiares y esporádicas, y
importante con su empleo. se originan por una alteración en la embriogénesis
El déficit de antitrombina III debe restaurarse pri- del sistema vascular cerebral durante la fase de
mero mediante concentrado de plasma fresco. Si la diferenciación de los vasos intracraneales
carencia es de proteína C o S, debe empezarse el inmaduros; existen ca- sos familiares como el
tratamiento con dicumarínicos sólo cuando se haya síndrome de Rendu-Osler- Weber. Las adquiridas
conseguido una buena anticoagulación con la se deben sobre todo a la acción de un traumatismo o
heparina. son secundarias a una trombo- sis venosa.
Los antifibrinolíticos pueden producir la lisis del Según la dimensión. El tamaño se valora midien-
trombo con mayor rapidez y facilitar la mejoría, pero do el lado más largo del nido de la malformación;
no existen datos adecuados sobre su utilización clí- según esto, una malformación es pequeña (menor
nica en las trombosis venosas. de 3 cm), mediana (entre 3 y 6 cm) o grande (más
El tratamiento antibiótico es fundamental en los de 6 cm). Mientras más grande sea una malforma-
casos de trombosis séptica y debe adecuarse al ger- ción, mayor será el riesgo de daño del tejido cere-
men agresor. En el caso de que este sea desconoci- bral circundante durante su resección.
do, se debe realizar una terapia combinada con Según la localización. Según su localización se
vancomicina, ceftriaxona y metronidazol. clasifican en supratentoriales, que constituyen del
La medicación anticonvulsiva sólo se recomien- 70 al 76 % del total, e infratentoriales (24 a 30 %).
da cuando haya crisis y debe ser retirada al cabo de Al- gunas series indican mayor predilección por el
un tiempo, tras la normalización del electroencefa- ló- bulo frontal (30 %).
lograma en los pacientes sin déficit o déficit leve. También se clasifican en superficiales y pro-
En los casos de elevación importante de la pre- fundas.
sión intracraneal, debe recurirse a medidas de apo- Según el número. Las MAV únicas se
yo: antiedematosos cerebrales y punciones lumbares denominan simples y son las más frecuentes (90
a repetición si existen alteraciones de la visión; sólo %); cuando hay más de una (10 %) se les llama
rara vez es necesario el drenaje ventricular. múltiples. Epidemiología
Las MAV constituyen el 8,6 % de todas las causas
de hemorragia subaracnoidea y su prevalencia en la
MALFORMACIONES población general se calcula en un 0,14 a 0,8 % por
ARTERIOVENOSAS año; se vuelven sintomáticas a cualquier edad, pero
el pico de mayor incidencia se sitúa en la cuarta
década de la vida. Existe un ligero predominio en
Concepto el sexo masculino, con una relación que varía en-
Son acumulaciones anormales y enredadas de vasos tre 1,4:1 y 2:1.
sanguíneos dilatados, que se producen por estructu- La incidencia familiar de las MAV es baja y
ras vasculares congénitamente malformadas, en las hasta ahora han sido reportadas un total de 7
que los vasos aferentes arteriales fluyen de forma familias. En estos casos familiares el patrón de
directa hacia los vasos eferentes venosos, sin la re- herencia sugeri- do es autosómico dominante.
sistencia normal de un lecho capilar intermedio.
414
Manifestaciones clínicas tra por lo general en casos de grandes malformacio-
No todas las MAV son clínicamente manifiestas, pues nes de la región centro parietal y en aquellas situa-
das en los núcleos basales o en el tallo cerebral.
muchas permanecen asintomáticas durante toda la
Soplo intracraneal. Es uno de los signos
vida. Para varios autores, ocasionan el 1 % de todos
cardina- les, aunque menos frecuente que los
los accidentes vasculares cerebrales. La hemorragia,
anteriores. Por lo común es percibido por el
la cefalea y las convulsiones son las manifestacio-
paciente y luego el médico lo comprueba en la
nes clínicas habituales; el soplo orbitario también es
exploración; otras veces el síntoma es puramente
un hallazgo frecuente en estos pacientes.
subjetivo.
Hemorragia. La hemorragia es comúnmente el
Los sitios en los que mejor se ausculta son los
primer síntoma de una MAV y su incidencia varía
globos oculares, mastoides y la región craneal veci-
entre el 40 y el 60 %; éstas pueden ser sintomáticas
na a la malformación. Se aconseja colocar al enfermo
o asintomáticas. Las hemorragias sintomáticas se
en decúbito supino y con la cabeza en hiperexten-
clasifican en parenquimatosas, subaracnoideas y ven-
sión. Aunque un soplo intracraneal se oye también
triculares. El riesgo de muerte con el primer sangra-
en otras condiciones patológicas (hipertensión in-
miento es de un 10 %, mientras que para otros es de
tracraneal en niños, tumores muy vascularizados si-
un 29 %.
tuados cerca de o en el cráneo, anemia severa),
Las MAV pequeñas tienen mayor tendencia a san-
éstos por lo general tienen características
grar, tanto si son de localización periventricular como
auscultatorias diferentes.
si flotan de forma libre en el ventrículo; en contraste
con la hemorragia causada por la ruptura de un aneu- Diagnóstico
risma, el pico de incidencia ocurre en jóvenes y el
vasospasmo es un evento infrecuente. La facilidad y agudeza del diagnóstico clínico de-
penderán de que el paciente presente o no un
La hemorragia puede tener una recidiva, pero a
cuadro de hemorragia intracraneal, cuyo aspecto
pesar de esto la mortalidad es más baja que en el
distintivo es la frecuencia de su ocurrencia en gente
aneurisma.
joven.
Algunos autores señalan a la actividad física y al
La TAC permite la detección de las MAV en el
primer trimestre del embarazo como las situaciones
85 a 95 % de los casos, las que se observan como
que más desencadenan su ruptura. imá- genes hiperdensas bien definidas, sin efecto de
Convulsiones. Las crisis convulsivas siguen en masa, que tras la administración de contraste
orden de frecuencia como síntoma inicial (36 %) y endovenoso se refuerzan intensamente y aparecen
preceden, coinciden o son posteriores al sangramien- entonces como imágenes serpiginosas que
to de una MAV. El tipo de crisis, la gravedad y su corresponden a los vasos de la malformación. La
respuesta al tratamiento no está en relación con el TAC craneal permite detec- tar hemorragias
tamaño ni con la localización. Las crisis focales sin parenquimatosas, intraventriculares y
pérdida de la conciencia son las más comunes, aun- subaracnoideas en el 90 a 95 % de los casos.
que se han descrito crisis tónicas generalizadas y Como hecho práctico, ante un hematoma lobular
también secundariamente generalizadas. en una persona joven sin antecedente de hiperten-
Cefalea. La cefalea es de tipo migrañoso, ocurre sión arterial, se debe sospechar una MAV como
en quizás la quinta parte de los pacientes y por mu- causa subyacente.
chos años a veces es la única molestia. El dolor es En la fase arterial de la angiografía convencio-
intenso y por lo general afecta sólo a un lado de la nal, se ven vasos tortuosos y dilatados que nutren la
cabeza. Son comunes las alucinaciones visuales. lesión (Figs. 39.9 a y 39.9 b), y muchas veces se
Hemiparesia. Se produce por “robo” vascular, con observa asimismo el ovillo vascular angiomatoso, e
un mayor aflujo de sangre hacia los vasos de baja incluso en ocasiones las venas de drenaje en virtud
resistencia representados por la MAV, con la consi- de la mayor rapidez circulatoria originada por el
guiente hipoperfusión del tejido cerebral adyacente. shunt arteriovenoso; en la fase venosa, además de
Es de naturaleza lentamente progresiva, rara vez se en las venas, puede aun persistir contraste a nivel
acompaña de trastornos sensitivos y se la encuen- del nódulo angiomatoso.
La RMN ha desplazado a la TAC craneal en el
estudio de las MAV, ya que no sólo aporta mayor
información anatómica, sino también ofrece aspectos
415
funcionales. La resonancia permite calcular el ta-
maño del nido, determinar las arterias nutricias y
las principales venas de drenaje, y conocer el
estado del tejido vecino (si hay edema, isquemia,
gliosis, etc.). Tratamiento
La formación de un hematoma intracraneal secun-
dario a una MAV que compromete la vida del pa-
ciente, demanda su evacuación quirúrgica, aunque
cuando es masiva la situación puede ser irreversible
y ocurrir la muerte dentro de 24 h; pero ésta sería la
situación de un pequeño número de casos, en los
cuales la mortalidad por la primera hemorragia es
alrededor de 6 % y por recurrencia, el doble de esta
cifra.
Es importante tener en cuenta una serie de consi-
deraciones perioperatorias:
1. Por lo general, la recurrencia del sangramiento
cuando sucede, no es tan precoz como en el
caso de los aneurismas, por lo que se
recomien- da esperar a que la hemorragia se
reabsorba parcialmente, disminuya el edema
Fig. 39.9a. Angio carotídeo. En la vista anteroposterior se ob- y la situa- ción clínica del paciente se
serva una malformación arteriovenosa a expensas de los vasos
de la arteria cerebral anterior. estabilice.
2. Entre 10 y 15 % de las MAV presentan un
aneu- risma asociado. La decisión de cual se
debe operar primero, depende de cual haya
sido el causante del sangramiento.
3. Es recomendable la administración de dexa-
metasona y anticonvulsivantes para reducir el
riesgo de edema cerebral y de crisis con-
vulsivas.
4. Hay que evitar elevaciones importantes de la
presión arterial; con posterioridad a la inter-
vención quirúrgica, se debe mantener entre
100 y 110 mmHg de presión diastólica.
5. Ante la aparición de cualquier déficit neuroló-
gico, en especial de tipo motor, se recomienda
iniciar un plan de rehabilitación para evitar se-
cuelas mayores.

Las modalidades neuroquirúrgicas son: la embo-


lización, que consiste en la oclusión progresiva y
en diferentes etapas de las arterias nutricias; la
radioci- rugía estereotáxica con radicales gamma;
la radio- cirugía estereotáxica por emisión de
positrones, y la radioterapia estereotáxica con
partículas pesadas
Fig. 39.9b. Angio carotídeo. En la vista lateral se confirma la (helio).
fístula a-v en el territorio de la arteria cerebral anterior.
416
40
TUMORES INTRACRANEALES
Incidencia meningiomas y neurinomas afectan más a las mu-
jeres.
La incidencia de los tumores intracraneales varía
Raza. Los astrocitomas muestran predilección
según la fuente donde se obtiene el dato: si procede
por la raza blanca y los meningiomas, por la negra.
de informes de autopsias o de series quirúrgicas.
Russell y Rubinstein encontraron al examinar Etiología
protocolos de necropsias, que el 9,2 % de todos los La etiología de estos tumores sigue siendo objeto
tumores de la economía se encontraban en el en- de discusión y se han valorado varios factores
céfalo y que el 49 % de ellos eran gliomas. desenca- denantes: físicos, químicos, ambientales,
La incidencia global en la población alcanza va- virales y genéticos, muchos de ellos basados en
lores entre 5 y 15/100 000 habitantes/año; es nece- estudios esta- dísticos. Dentro de los factores
sario señalar que el número de nuevos enfermos cada físicos se han men- cionado el traumatismo de
año, se ha visto incrementado a partir de la década cráneo y las radiaciones fundamentalmente; no hay
del 70, con la aparición de la TAC, la RMN y más estudios concluyentes que avalen el papel de los
tarde con el perfeccionamiento de las biopsias por traumatismos, pero las radia- ciones ionizantes
estereotaxia, aunque estos nuevos métodos no ne- utilizadas en el tratamiento de la tiña capitis
cesariamente justifican por completo el aumento en aumentan el riesgo para la ulterior apari- ción de
el número de reportes. meningiomas y gliomas, según estudios con
Los tumores intracraneales se dividen en 3 gran- significación estadística. La exposición a derivados
des grupos. petroquímicos y factores ambientales, han sido tam-
bién investigados, pero no parece que tengan un
1. Tumores primitivos intraxiales (parenquima- peso positivo de forma aislada.
tosos) (de forma aproximada el 50 %). Es conocido que ARN-virus, como los retrovirus
2. Tumores primitivos extraxiales no parenqui- y oncornavirus, pueden provocar gliomas experi-
matosos, como el meningioma. mentalmente, así como que el adenovirus tipo 12, el
3. Tumores metastásicos. virus SV-40 y el JC polioma (Papova), tienen pro-
piedades neuroncogénicas. La participación de fac-
Edad. Aproximadamente las 2/3 partes de los tu- tores genéticos es un hecho bien establecido en
mores intracraneales se presentan antes de los 16 aquellos tumores que acompañan a las facomatosis.
años, y en este grupo de edad representan el 20 % La génesis de los gliomas en la actualidad se in-
del total de todas las neoplasias, superados sólo por terpreta como un proceso multifactorial que incluye
las leucosis. Durante los primeros 6 meses de la vida susceptibilidad genética, traslocaciones cromosómi-
son más frecuentes en el compartimiento supraten- cas y otras mutaciones, donde los factores físicos,
torial, pero a partir del 2do. año son de forma ma- químicos y ambientales pudieran ser sólo un ele-
yoritaria infratentoriales. En el adulto predominan
mento.
los supratentoriales.
Sexo. En sentido general, el 56 % se presentan en Fisiopatogenia
el sexo masculino y el 44 % restante en mujeres. En
El crecimiento de los tumores intracraneales depen-
los hombres son más frecuentes el glioblastoma,
de de sus características histológicas y otras varia-
meduloblastoma y craneofaringioma, en tanto los
bles biológicas. En su expansión, la lesión provoca

417
efectos sobre las estructuras circundantes, por com- 3. Con diferenciación ependimaria.
presión o por infiltración; para que se produzca esta • Ependimoma bien diferenciado
última, las células tumorales deben poseer ciertas • Ependimoma anaplásico.
características: multiplicación, fagocitosis, movili- 4. Con diferenciación coroidea.
dad, pérdida del control de crecimiento y elabora- • Papiloma de plexo coroide.
ción de sustancias tóxicas o líticas. 5. Con diferenciación pineocítica.
El crecimiento depende de la existencia o ausen- • Pineocitoma.
cia de mitosis y su velocidad varía de acuerdo con • Pineoblastoma.
la frecuencia de división celular, la presencia de cé- 6. Con diferenciación neuronal o neuroblás-
lulas en estado proliferativo, necrosis intratumora- tica.
les, proliferación de células endoteliales con vasos • Gangliocitoma o glanglioneuroma.
de neoformación, flujo sanguíneo local y espacio dis- • Ganglioglioma.
ponible para el crecimiento. • Neuroblastoma.
En ocasiones, algunos tumores como los 7. Pobremente diferenciados.
meduloblastomas, germinomas, ependimomas y más • Meduloblastoma.
raramente los glioblastomas multiformes y gliomas • Espongioblastoma polar primitivo.
anaplásicos, pueden a través del LCR provocar me- II. Tumores de las vainas nerviosas derivados
tástasis dentro del neuroeje, a distancia de la lesión de la células de Schwann.
primaria. • Neurofibroma.
De forma excepcional los tumores del SNC pro- • Neurinoma bien diferenciado.
ducen metástasis en otros sitios de la economía: pul- III. Tumores meníngeos derivados de o con di-
món, hígado, ganglios linfáticos, huesos, pleura y ferenciación hacia células aracnoideas.
riñón, en orden descendente de frecuencia. La dise- • Meningioma bien diferenciado.
minación extraneural se considera causada por la • Meningioma atípico.
entrada de células tumorales en la circulación san- • Meningioma maligno.
guínea durante las intervenciones quirúrgicas, aun- IV. Tumores melánicos.
que también se han reportado metástasis en pacientes • Melanomas.
no operados. V. Tumores de origen mesenquimal.
• Mixoma.
Clasificación • Lipoma.
Existen diversas clasificaciones. En la actualidad, • Tumores osteogénicos.
la más aceptada internacionalmente es la clasifica- • Linfomas primarios.
ción histológica de los tumores del SNC de la OMS • Tumores y seudotumores vasculares:
elaborada en 1979, a la cual se han introducido pe- • Hemanglioblastoma.
queñas modificaciones a la luz de los avances al- • Malformación arteriovenosa.
canzados en los últimos años con tecnologías más • Malformación venosa.
modernas. • Enfermedad de Sturge-Weber.
Por lo extensa de la clasificación, se expondrá un VI. Tumores derivados de células germinales.
resumen de ella. • Teratoma.
• Coriocarcinoma.
I. Tumores neuroectodérmicos.
VII. Tumores y seudotumores de origen disem-
1. Con diferenciación astroglial. brioplásico.
• Astrocitoma bien diferenciado
1. Quistes neuroepiteliales.
• Astrocitoma subependimario de células gi-
• Quiste ependimario.
gantes.
• Quiste de la hendidura de Rathke.
• Glioblastoma multiforme.
• Quistes dermoide y epidermoide.
2. Con diferenciación oligodendroglial.
• Quistes aracnoideos.
• Oligodendroglioma bien diferenciado. 2. Craneofaringioma.
• Oligodendroglioma anaplásico.
3. Hamartoma neuronal.
418
VIII. Tumores derivados de la adenohipófisis.
• Adenomas de la hipófisis.
• Carcinoma hipofisario.
IX. Extensión de tumores de la vecindad.
• Paraganglioma.
• Cordomas
X. Tumores metastásicos. XI.
Tumores no clasificados.

La clasificación de los tumores del SNC de la


OMS se basa fundamentalmente en las característi-
cas histogénicas de la lesión, pero a la vez tiene en
cuenta los grados de diferenciación celular, por lo
que en cada grupo se consideran formas bien dife-
renciadas y formas anaplásicas, que son las que tie- Fig. 40.1. Glioblastoma multiforme parietal izquierdo. Obsér-
nen un comportamiento biológico más maligno. Se vese las áreas de necrosis y hemorragia intratumoral con des-
han establecido cuatro grados (Kernoham): los tu- plazamiento de las estructuras de la línea media hacia la
derecha
mores más diferenciados con un comportamiento
(hernia cingulada).
menos agresivo, se clasifican en I y II, en tanto que
los grados III y IV son los más anaplásicos, con un
comportamiento maligno.
Peculiaridades
anatomoclínicas
de algunos tumores
intracraneales
Glioblastoma multiforme
Tumor muy maligno desde el punto de vista clínico e
histológico (grado IV), altamente indiferenciado con
anaplasia de diferentes grados, que tiene como carac- Fig. 40.2 Glioblastoma multiforme de localización profunda
terística la presencia de focos de necrosis (Fig. 40.1), en el hemisferio derecho que invade el centro oval.
vasos de neoformación y carácter invasivo. Existen
dos variedades morfológicas: el gliosarcoma y el
glioblastoma de células gigantes. Constituyen
aproximadamente la mitad de todos los gliomas del
SNC, con una mayor incidencia entre la cuarta y
quinta décadas de la vida. Tiene un crecimiento muy
rápido, se localiza con preferencia en los lóbulos
frontales y temporales (Fig. 40.2) y puede extender-
se hacia el hemisferio vecino a través del cuerpo
calloso (Fig. 40.3).
Aunque de forma excepcional, es capaz de pro-
ducir metástasis fuera del SNC.
Se presenta generalmente como un síndrome de
hipertensión intracraneal (SHI) de curso rápido, al
Fig. 40.3. Glioblastoma multiforme frontal que cruza la línea
media a través del cuerpo calloso.
419
que pueden añadírsele signos focales y convulsio- dondeados, aunque a veces son como una lámina
nes, según su localización. de grosor variable y reciben el nombre de
meningioma en placa.
Neurinoma Estos tumores asientan de preferencia en el re-
Este tumor, también conocido como neurilemoma y cinto intracraneal, pero también se les localiza en el
schwamoma, es de comportamiento benigno de gra- raquis y en la unión craneocervical.
do I; cuando se desarrolla intracranealmente, lo hace Resulta característico en los meningiomas la pre-
a partir de la rama vestibular del VIII nervio craneal sencia de alteraciones en los huesos vecinos (hipe-
y en ocasiones del V, IX y X. Representa alrededor rostosis, osteólisis, cráneo en cepillo, etc.) y con
del 8 % de todos los tumores intracraneales. relativa frecuencia tienen calcificaciones
Constituye entre el 70 y 80 % de todos los tumo- intratumo- rales, lo que hace posible su diagnóstico
res que crecen en el ángulo pontocerebeloso, donde a veces tan solo con la placa de cráneo simple.
debe hacerse el diagnóstico diferencial con menin- Tienen una evolución muy lenta y su sintomato-
giomas, colesteatomas y ependimomas de los rece- logía depende de la localización, pero las convul-
sos laterales del IV ventrículo. siones y el SHI, acompañado de signos focales o
Debuta de forma habitual por síntomas auditivos sin ellos, constituyen las formas más comunes de
(acufenos e hipoacusia) pre- sentación.
Neurofibromas. Son tumores que se presentan con
frecuencia asociados a la enfermedad de Von Rec- Tumores y
klinghausen; son únicos o múltiples e histológica-
seudotumores vasculares
mente clasifican como grado I. Meningiomas
Se agrupan en esta categoría un número de lesiones
Los meningiomas son tumores derivados de las células originadas en los vasos sanguíneos; de todas ellas,
aracnoideas (aracnoidocitos), de origen neuroecto- el hemangioblastoma es considerado como una ver-
dérmico, asociadas con las vellosidades aracnoideas dadera neoplasia, en tanto que el resto, por su origen
y los puntos de entrada y salida de los vasos y ner-
malformativo, son llamados hamartomas vasculares.
vios en la duramadre.
Hemangioblastoma. Los hemangioblastomas son
Estas células aracnoideas tumorales tienen di-
tumores benignos de grado I, constituidos por vasos
ferentes morfologías y dan lugar a unas 10 variedades
capilares dilatados y células fundamentalmente
de formas diferenciadas y otras 4 con diferenciación
reticulares, de naturaleza desconocida, casi siempre
metaplásica, todas ellas consideradas benignas. Por
otro lado, se consideran meningiomas atípicos quísticos.
cualquiera de los antes referidos cuando muestren Representan entre el 1 y 2,5 % de todas las neo-
un carácter más agresivo (necrosis, hipercelulari- plasias intracraneales y alrededor del 10 % de los
dad, etc.), mayor tendencia a las recidivas y capacidad tumores de la fosa posterior; de forma aproximada
de infiltrar la duramadre y el hueso. Por último, se el 85 % se localiza en los hemisferios cerebelosos,
encuentran el meningioma papilar y el hemangio- un 3 % en la médula espinal y un 1,5 % en los he-
pericítico, considerados malignos, pues además de misferios cerebrales. Pueden presentarse como una
los signos de atipia celular, son capaces de infiltrar afección aislada, pero un 10 a 20 % forma parte de
el encéfalo y dar metástasis extraneurales (pulmón, la enfermedad de Von Hippel Lindau y son únicos
hígado). Estas formas malignas representan sólo o múltiples.
el 1 % del total de ellos. En un 20 % de los casos existen otros miembros
Los meningiomas constituyen aproximadamente de la familia afectados por este tipo de tumor y son
el 20 % de todas las neoplasias intracraneales, son más comunes en la cuarta década de la vida, con
más frecuentes en las mujeres y se presentan de for- predominio en el sexo masculino. Se presentan ha-
ma habitual entre la 5ta. y 6ta. décadas de la vida. bitualmente como un SHI acompañado de signos
Son tumores no parenquimatosos, encapsulados, re- cerebelosos y en ocasiones de eritrocitocis, y con
menor frecuencia de policitemia.
420
Tumores hipofisarios Tumores benignos
La hipófisis es una glándula situada en el interior de de la adenohipófisis
la silla turca del esfenoides en la base del cráneo; Los tumores benignos de la adenohipófisis repre-
está constituida básicamente por 2 lóbulos, uno an- sentan casi la totalidad de los tumores hipofisarios,
terior o adenohipófisis, que representa el 80 % de su pues los adenocarcinomas y los de la
volumen, y otro posterior o neurohipófisis. El lóbu- neurohipófisis son extremadamente raros. Ahora
lo o pars intermedia es rudimentario en el humano. bien, es necesa- rio aclarar que este calificativo de
Desde el punto de vista embriológico, el lóbulo an- “benigno” basado en su aspecto histológico, no se
terior deriva de la bolsa de Rathke y el posterior, de corresponde siem- pre con su comportamiento,
un divertículo del suelo del III ventrículo; ello im-
pues aunque son inca- paces de producir
plica un diferente origen para los tumores de una u
metástasis, sí pueden infiltrar las estructuras
otra parte, tal como se conceptúa en la clasificación,
vecinas, tener recidivas, comprometer estructuras
pero con fines prácticos se hará referencia a ambos
vitales y causar la muerte.
en esta sección.
La forma de presentación, el cuadro clínico, el CLASIFICACIÓN DE HARDY DE LOS ADENOMAS
HIPOFISARIOS SEGÚN EL TAMAÑO
Y EL CARÁCTER INVASIVO
diagnóstico y el tratamiento de estas lesiones difie-
ren en gran medida de los otros tumores intracra- Estadio I. Microadenomas (menores de 10 mm de diá-
metro).
neales, por lo que requieren un estudio diferenciado. Estadio II. Macroadenomas (mayores de 10 mm de diá-
Los adenomas hipofisarios representan entre el 10 y metro), con extensión supraselar o sin ella.
el 15 % de todos los tumores intracraneales en la Estadio III. Macroadenomas que invaden localmente el
suelo de la silla y pueden causar aumento de
mayoría de las series quirúrgicas y en la población su tamaño, con extensión supraselar o sin
general tienen una prevalencia estimada entre 0,02 ella.
y 0,025 %. Sin embargo, en las series confecciona- Estadio IV. Macroadenomas invasivos con destrucción
das a partir de los informes de autopsias, estos tu- di- fusa de la silla, con extensión supraselar o
sin ella.
mores se presentan entre el 10 y el 27 % en personas
fallecidas por otras causas, lo que denota que un
Etiopatogenia de los adenomas hipofisarios
número considerable de estas lesiones pasan inad-
La etiopatogenia de los adenomas hipofisarios si-
vertidas en vida, aun sin tratamiento específico, pues
gue siendo objeto de discusión; si bien en algunos
no alcanzan un volumen crítico para producir sínto-
momentos se consideró que factores u hormonas
mas importantes.
hipotalámicas podían desarrollar un tumor
De las afecciones que asientan en la región selar,
hipofisa- rio, estudios ulteriores se refieren al
los adenomas hipofisarios representan el 90 %, pero
origen mono- clonal de varios adenomas
en esta zona aparecen también otras lesiones que
pituitarios a partir de la presencia de un oncogen,
requieren de un diagnóstico diferencial con los
sin excluir que puedan coincidir con otros
primeros.
trastornos, como cambios en los niveles
Con fines didácticos, los tumores de la hipófisis
hipotalámicos o a nivel de sus receptores y
se agrupan de la forma siguiente:
participación de factores de crecimiento locales.
I. Tumores de la adenohipófisis. Ocasionalmente, los adenomas hipofisarios for-
a. Benignos: man parte de una enfermedad hereditaria con
1. Secretores. carác- ter autosómico dominante, que cursa con:
2. No secretores. adenoma hipofisario, tumores secretores del
b. Malignos: adenocarcinomas. páncreas e hiper- paratiroidismo por hiperplasia, y
II. Tumores de la neurohipófisis. que se conoce como
1. Infundibulomas. neoplasia endocrina múltiple tipo I.
2. Coristomas. En raras ocasiones la aparición de un adenoma
hipofisario ha sido relacionada con factores perifé-
ricos, como el hipertiroidismo o la administración
exógena de estrógenos.

421
Cuadro clínico de los adenomas la circulación del LCR, lo que se expresa clínica-
mente como un SHI.
hipofisarios Otras extensiones de estos macroadenomas son
Los adenomas hipofisarios se presentan en la clíni- hacia atrás hasta los pedúnculos cerebrales (trastor-
ca con una variedad compleja de síntomas y signos nos motores y sensitivos), hacia los lados (invasión
neurológicos y endocrinos, que pueden resumirse del seno cavernoso y disfunción de los pares cra-
desde el punto de vista práctico, en dos grandes gru- neales III, IV y VI) y hacia abajo (fístula de LCR).
pos de acuerdo con su forma de debut: Tumores malignos
1. Signos neurológicos o locales provocados por de la adenohipófisis
la compresión o invasión del tumor a estructu- Los adenocarcinomas hipofisarios son tumores ma-
ras adyacentes a la región selar. lignos de presentación infrecuente, que provocan
2. Signos endocrinológicos: metástasis a distancia. Histológicamente pueden
a. Secundarios al déficit de las hormonas de la mostrar signos de malignidad, como los carcinomas
adenohipófisis (hipopituitarismo). de otras localizaciones, pero sólo la presencia de
b. Secundarios al aumento de una, dos o más metástasis define su diagnóstico.
hormonas secretadas por el tumor.
Tumores de la neurohipófisis
Signos neurológicos o locales. Los adenomas hi- Son tumores de presentación muy infrecuente y su
pofisarios, una vez que comienzan a crecer, lo ha- origen es distinto a los de la adenohipófisis. Se han
cen desplazando y comprimiendo el resto de la propia descrito dos variedades: los infundibulomas, que
glándula, con lo cual provocan una deformidad se- representan una variedad de los astrocitomas
lectiva del suelo y el dorso de la silla turca; una vez pilocí- ticos, y el coristoma, también conocido
que han cubierto toda la capacidad de su estuche como myo- blastoma o tumor de células granulares,
óseo (silla turca), inician su extensión extraselar, la cuyo origen celular es incierto.
cual se produce en una o varias direcciones a la vez
y causa el aumento y ulterior destrucción de la silla. Tumores metastásicos
La presión que ejerce el tumor sobre la durama- dre El 25 % de los tumores malignos en otros lugares
que tapiza la silla y el diafragma selar (un re- de la economía, producen metástasis en el
pliegue de la duramadre que sella por arriba la silla encéfalo, leptomeninges (aracnoides y piamadre),
en forma de un techo, en el centro del cual hay un duramadre y hueso. De estos tres sitios, las
orificio que permite el paso del tallo pituitario), da metástasis paren- quimatosas son las más
lugar a la aparicón de cefalea, con frecuencia frecuentes (75 %).
retrorbitaria, frontotemporal, bitemporal y más ra- La incidencia de las metástasis cerebrales ha
ramente occipital. Esta cefalea a veces desaparece mos- trado un franco incremento en los últimos
de forma evolutiva, lo que se ha interpretado como años de- bido a:
que la lesión ha roto el diafragma selar y ha comen- 1. El aumento en tiempo de la supervivencia de
zado su extensión extraselar. pacientes con cánceres extracraneales por los
Una vez rebasado el diafragma, los tumores que avances terapéuticos.
crecen hacia arriba alcanzan la cisterna supraselar y 2. La precisión diagnóstica ha mejorado sustan-
a continuación el quiasma y los nervios ópticos, y cialmente con el advenimiento de la TAC y la
dan lugar a palidez de las papilas (atrofia óptica) y RMN.
defectos campimétricos simétricos o asimétricos, con 3. Existen evidencias experimentales de que al-
toma de la visión central o sin ella; las cuadranta- gunos quimioterápicos utilizados en el trata-
nopsias homónimas superiores y la hemianopsia miento del cáncer pueden provocar daños en
bitemporal son los hallazgos más típicos. Poste- la barrera hematoencefálica, lo que permite
riormente, el tumor alcanza el receso infundibular el acceso de células tumorales al SNC.
del III ventrículo, más tarde bloquea los agujeros de
Monro y da lugar a una hidrocefalia por bloqueo de Las metástasis cerebrales son únicas (25 a 40 %)
o múltiples (60 a 75 %); se localizan más en los
422
hemisferios cerebrales, en la unión de la sustancia Signos locales
gris y la blanca; con menos frecuencia en el cerebe- El cronopatograma adquiere un valor extraordina-
lo y rara vez en el tallo cerebral. rio en los tumores intracraneales para el
El término “metástasis solitaria” se utiliza por al- diagnóstico topográfico, y el establecer los
gunos para significar que no hay otras metástasis en síntomas iniciales puede servir para localizar el
el resto del organismo; otros autores lo hacen cuan- sitio de origen de la lesión.
do se desconoce el sitio del tumor primario, lo que Los síntomas y signos más característicos de los
ocurre en aproximadamente el 15 % de las metásta- tumores intracraneales dependen de que éstos se
sis cerebrales. ori- ginen por arriba (supratentoriales) o por
debajo de la tienda del cerebelo (infratentoriales).
Cuadro clínico de los tumores En el com- partimiento supratentorial se
intracraneales encuentran: los hemis- ferios cerebrales, ventrículos
laterales, núcleos grises de la base, la región
Los tumores cerebrales tienen diferentes formas de
hipotálamo-hipofisaria con el III ventrículo,
presentación:
mesocéfalo y las fosas anterior y media de la base
1. Alteraciones de la actividad nerviosa superior del cráneo. El compartimiento infratento- rial o
(trastornos neuropsicológicos). fosa posterior contiene el cerebelo, protube-
2. Síndrome de hipertensión intracraneal. rancia, bulbo raquídeo y el IV ventrículo.
La cefalea es el síntoma más común de los tumo-
3. Signos locales (motores, sensitivos, sensoria-
res intracraneales, se localiza con mayor frecuencia
les).
en las regiones frontal y temporal en las lesiones
4. Crisis epilépticas. supratentoriales, en oposición a la cefalea subocci-
5. La forma seudovascular, que remeda un acci- pital de los tumores de la fosa posterior; asimismo,
dente vascular encefálico. la rigidez de nuca y las posiciones anormales de la
6. Síndrome endocrinológico, fundamentalmente cabeza son más comunes y precoces en los tumores
para los tumores de la región hipotálamo-hi- infratentoriales.
pofisaria. Cuando la neoplasia alcanza un determinado vo-
lumen, da lugar a una serie de síntomas y signos
El cuadro clínico de los tumores intracraneales relacionados con el sitio donde se origina, que el
resulta muy variable y depende de su localización, clínico debe reconocer para orientarse en el diag-
variedad histológica y velocidad de crecimiento. En nóstico topográfico.
general, sus manifestaciones comprenden:
Tumores supratentoriales
1. Signos locales. Son los producidos in situ por Tumores de los hemisferios cerebrales
el efecto de masa del propio tumor y por la Los tumores más comunes en esta localización son
com- presión que él y su edema circundante los gliomas, meningiomas y los metastásicos.
ejercen sobre las estructuras vecinas. Desde el punto de vista clínico el 30 % de ellos
2. Síndrome de hipertensión intracraneal debutan con crisis convulsivas y se caracterizan por
signos deficitarios de empeoramiento progresivo,
En sentido general, la mayoría de los signos loca- que señalan habitualmente el sitio de origen del tu-
les y el SHI aparecen cuando el proceso ya ha alcan- mor, al cual se le añade casi siempre un SHI. Como
zado cierto desarrollo; sin embargo, las alteraciones ya se señaló, las alteraciones neuropsicológicas
neuropsicológicas suelen ser un síntoma temprano, pue- den ser un signo precoz, que con frecuencia
que con alguna frecuencia pasa inadvertido. Así pasa inadvertido para el enfermo y los familiares.
mismo, las lesiones que asientan en la porción ante-
rior del lóbulo frontal y en el lóbulo temporal del Tumores del lóbulo frontal. Los tumores del lóbulo
frontal del hemisferio dominante se manifiestan más
hemisferio no dominante, demoran en expresarse
temprano que los del no dominante, sobre todo
desde el punto de vista neurológico por ser áreas
cuan- do se ubica en las regiones más anteriores,
relativamente “silentes”. por ser esta un área relativamente “silente”.
423
Los elementos clínicos más característicos de los yen manifestaciones sensoriales olfatorias, visuales
tumores frontales son: y alteraciones de la conducta y el lenguaje.
Los elementos más característicos son:
• Alteraciones de la actividad nerviosa superior:
conducta, memoria y personalidad. Estos in- • Crisis uncinadas. Consisten en una sensación
cluyen trastornos afectivos como tendencia de olor generalmente desagradable, como ex-
erótica, apatía, alteraciones importantes de la presión de una lesión en la amígdala y circun-
memoria y del juicio crítico; el paciente pue- volución del hipocampo de cualquiera de los
de estar consciente de lo que hace, pero se dos hemisferios. Si la lesión se extiende o la
muestra indiferente frente a ello o presenta ver- descarga se propaga a las áreas vecinas, apa-
daderos cuadros demenciales. recen crisis psicomotoras, movimientos de
• Convulsiones: con frecuencia de tipo jackso- masticación, chupeteo, salivación y automa-
niano o secundariamente generalizadas y pre- tismo.
cedidas de forma habitual de un “aura” motora. • Cuadrantanopsia homónima superior contra-
• Defecto motor: es común encontrar distintos lateral.
grados de paresia o parálisis, sobre todo mo- • Alucinaciones visuales. Son poco frecuentes
noparesias braquiales o faciobraquiales. y se presentan en los tumores
• Alteraciones del lenguaje: disfasia o afasia mo- temporoccipitales. Los objetos percibidos no
tora. aparecen deforma- dos y son imágenes
• Cuando el tumor invade la cara basal del lóbu- complejas (edificios, ani- males, personas,
lo frontal, puede provocar un síndrome de etc.) brillantes. En ocasiones estas
Foster-Kennedy (anosmia y atrofia óptica manifestaciones constituyen el aura de crisis
homolateral, con papiledema contralateral). jacksonianas o generalizadas.
• Crisis psicomotoras complejas. También se
Otros signos menos frecuentes de los tumores observan fenómenos como el déja vu, jamais
frontales son: vu y un estado de ensueño o placidez conoci-
do como dreamy state.
• Ataxia frontal de Bruns: con tendencia a la • Alteraciones del lenguaje. Las lesiones situa-
retropulsión, que es contra, ipsi o bilateral. das en la porción posterior del lóbulo tempo-
• Reflejo de prehensión forzada (grasping and ral del hemisferio dominante suelen producir
groping), que a veces se acompaña de una ten- diferentes grados de disfasia o una afasia sen-
dencia incontrolable a coger los objetos que sorial (Wernicke).
se encuentran a su alcance. Tiene valor locali- • Alteraciones de la memoria, fundamentalmen-
zador sólo cuando es unilateral y es expresión te para los eventos recientes.
de daño de la corteza frontal premotora con-
tralateral (área 4). Tumores del lóbulo parietal. Los tumores del ló-
• Reflejo plantar tónico (signo precoz de lesión bulo parietal se caracterizan por una serie de sínto-
del lóbulo frontal). mas y signos que se producen por las alteraciones
• Signo de Babinski (área 4). de sus funciones como analizador de las diferentes
• Signo de Hoffman (áreas 4 y 6). sensibilidades. La sensibilidad superficial (dolor,
temperatura y tacto grosero) no está visiblemente
Tumores del lóbulo temporal. El lóbulo temporal afectada, pero los fenómenos de discriminación y
es dañado en casi la mitad de todas las neoplasias la sensibilidad propioceptiva sí lo están, así como
infiltrativas del SNC. El diagnóstico clínico resulta tam- bién otras funciones por su vecindad y
difícil, sobre todo cuando asientan en el hemisferio relación con los otros lóbulos del hemisferio.
no dominante (“área silente”). Destacan en el cuadro clínico los elementos si-
El cuadro clínico de estas lesiones está matizado guientes:
por una variedad de síntomas complejos que inclu-
• Astereognosia (incapacidad de reconocer un
objeto por su forma y textura).
424
• Alteraciones de la sensibilidad propioceptiva. neralmente no abarca todo el hemicuerpo y el
Están afectadas la barestesia (sensibilidad a la sensi- tivo se corresponde con lo descrito en las
presión), la batiestesia (sentido de las actitu- lesiones parietales; pueden, además, producir una
des segmentarias), la barognosia (sentido de disfasia mixta.
la apreciación del peso de los objetos) y la Tumores del lóbulo occipital. Son poco frecuen-
palestesia (sensibilidad vibratoria). tes y causan alteraciones del campo visual, a menu-
• Inatención táctil (extinción sensitiva). El pa- do incompletas y progresivas; la hemianopsia
ciente tiene dificultades o no es capaz de loca- homónima contralateral sería el trastorno clásico; a
lizar el sitio de dos estímulos táctiles aplicados veces se presentan alucinaciones visuales, general-
a la vez. mente de objetos deformados (macropsia, discroma-
• Manifestaciones parestésicas (entumecimien- topsia, metamorfopsia), visión de manchas oscuras,
to, hormigueo, etc.), que constituyen a veces colores brillantes, etc.; así como también poliopsia
el aura de una crisis convulsiva focal o gene- (superposición de varias imágenes); todos ellos
ralizada. pue- den ser el aura de una crisis jacksoniana, pero
• Autotopognosia (imposibilidad para designar éstas son en realidad poco comunes.
las diferentes partes de su organismo) y agnosia Tumores del centro oval. Son los tumores origi-
digital (incapacidad para identificar por su nados en la sustancia blanca de los hemisferios ce-
nombre u orden sus propios dedos). Ambas son rebrales; por lo general invaden o comprimen las
habitualmente bilaterales y se producen por estructuras sensitivas y motoras vecinas, y produ-
una lesión en el hemisferio dominante. cen hemianestesia y hemiplejía contralateral, acom-
• Anosognosia (desconocimiento del lado o pañadas de síntomas de hipertensión intracraneal,
miembros afectados). Por lo general ocurre de defectos del campo visual, un síndrome talámico
forma contralateral al hemisferio no dominan- completo o incompleto y hemiatetosis o hemicorea.
te, por lo que el defecto es casi siempre del Tumores de los núcleos grises de la base. La ma-
hemicuerpo izquierdo y más pronunciado en yor parte de las veces son astrocitomas pilocíticos
la pierna. juveniles, de curso lento, que no provocan un sín-
• Apraxia para vestirse. drome típico; sin embargo, frente a un paciente con
• Asimbolia del dolor. El enfermo no muestra manifestaciones de hipertensión intracraneal y un
reacciones de defensa frente al dolor, a pesar síndrome extrapiramidal, debe sospecharse un tu-
de sentirlo. mor que está ejerciendo compresión del globus
• Síndrome de Gerstmann (agnosia táctil, desorien- pallidus. Los tumores de esta localización suelen
tación derecha-izquierda, agrafia y acalculia). causar también un SHI lentamente progresivo, con
Se produce por lesión de las circunvoluciones alteraciones visuales y psíquicas. Cuando asienta
angular y supramarginal del hemisferio domi- en el tálamo, es posible encontrar un síndrome
nante y ocasionalmente se acompaña de alexia, de Déjerine-Roussy caracterizado por una
apraxia ideomotriz, pérdida del nistagmo hemihipoes- tesia (sobre todo profunda),
optocinético y hemiparesia del mismo lado. astereognosia con do- lores intensos espontáneos
• Alteraciones visuales: cuadrantanopsia homó- (anestesia dolorosa) y una hemiparesia frustre, todo
nima inferior contralateral y metamorfopsia ello contralateral al sitio
(distorsión en la forma y tamaño de los obje- del tumor.
tos). Tumores del cuerpo calloso. Se traducen por
mani- festaciones clínicas de índole demencial o
Tumores de la región rolándica. Se caracterizan
síntomas psiquiátricos de tipo lóbulo frontal, con
por manifestaciones motoras o sensitivas, aisladas o
trastornos del equilibrio e incontinencia de
mixtas, pues esta zona separa las cortezas motora y
esfínteres. La hi- pertensión intracraneal es precoz
sensitiva. Los trastornos aparecen precozmente y
y se acompaña de ataxia y apraxia ideomotriz,
preceden a los síntomas de hipertensión intracraneal.
reflejos patológicos, defectos motores y crisis
Son frecuentes las convulsiones de tipo jacksoniana
convulsivas. A veces los enfermos presentan
con auras sensitivo-motoras; el defecto motor ge-
imposibilidad para la bipedes- tación y la marcha,
con tendencia a la retropulsión
(astasia-abasia frontocallosa)
425
Tumores del III ventrículo. Son poco frecuentes y acomodación y convergencia, las pupilas muestran
el quiste coloide es la lesión típica de su porción una tendencia a la midriasis y reaccionan
anterior. No tienen un cuadro característico, pero tra- pobremente a la luz).
dicionalmente se ha hecho énfasis en las crisis de Poppen y Marino han descrito tres fases evo-
hipertensión intracraneal aguda (a veces fatales), lutivas:
provocadas por una hidrocefalia a válvula cuando el
tumor bloquea el agujero de Monro, y que desapa- 1. Cefalea con vómitos o sin ellos.
rece con los cambios de posición de la cabeza. 2. Visión borrosa, dipoplia, alteraciones psíqui-
Desde el punto de vista clínico debe sospecharse cas, ataxia, síndrome de Parinaud, vértigos y
frente a un paciente con síntomas demenciales, ce- somnolencia.
falea de carácter intermitente o no, que se desenca- 3. Papiledema, debilidad marcada y variados
dena o desaparece con los cambios de posición. gra- dos de espasticidad en los miembros.
Presentan, además, episodios de parestesias bilate-
El síndrome de Parinaud es el elemento clínico
rales en los miembros, sensación de embotamiento,
más característico, aunque no es patognomónico de
visión borrosa y debilidad de las piernas, que en
tumor pineal.
ocasiones les provoca caídas repentinas e ines-
En otras ocasiones estas lesiones producen un
peradas.
sín- drome endocrinológico variado (diabetes
Los tumores de la porción anterior se acompañan
insípida, hipogonadismo o macrogenitosomia,
a veces de disfunción diencéfalo-hipotalámica, como
pubertad pre- coz o retardada), el cual es más
hiperglicemia, glucosuria, alteraciones de la regula-
frecuente en los tu- mores germinales.
ción térmica, hiperfagia, etc.
Los de la porción posterior del III ventrículo son Tumores infratentoriales o de la fosa
básicamente los de la región pineal, y serán descri- posterior
tos más adelante.
Los tumores de la fosa posterior tienen como
Tumores de los ventrículos laterales. Los tumo-
particularidad la precocidad en la aparición del
res más frecuentes en esta localización son los epen-
SHI, con la excepción de los que asientan
dimomas, papilomas de los plexos coroideos, primariamente en el tallo cerebral, que serán objeto
neurocitomas, meningiomas y otros. No tienen un de una descrip- ción aparte.
cuadro clínico típico en cuanto a signos focales y lo Para su descripción se dividen en tumores de los
característico en ellos es un SHI precoz, por hidro- hemisferios cerebelosos, tumores de la línea media
cefalia, en dependencia de hacia donde se extiende (vermis del cerebelo y IV ventrículo) y tumores del
el tumor. Pueden aparecer signos deficitarios moto- ángulo pontocerebeloso.
res, trastornos mentales, apraxia, crisis hipertónicas,
defectos del campo visual (hemi o cuadrantanopsia Tumores de los hemisferios cerebelosos
homónima contralateral, etc.). En esta localización los más frecuentes son el
Tumores de la región pineal. Los germinomas astrocitoma quístico y otros tipos de gliomas, he-
constituyen las lesiones más frecuentes en esta re- mangioblastomas y tumores metastásicos. Su cua-
gión y alcanzan el 35 %; le siguen los procesos no dro clínico está caracterizado por un SHI con
tumorales y las neoplasias de la vecindad; los elementos de estirpe cerebelosa, que son ipsilaterales
pinealomas verdaderos representan alrededor de al sitio de la lesión; entre ellos se destacan:
un 15 %.
La celeridad con que se presentan los elementos • Alteraciones de la marcha. Aumento de la base
clínicos depende de la histología del tumor; en sen- de sustentación, tendencia a la lateropulsión (el
tido general se caracterizan por un SHI (por la hi- enfermo se desvía hacia el lado de la lesión),
drocefalia consecutiva al bloqueo del LCR en la parte marcha zigzagueante o de ebrio.
posterior del III ventrículo y porción superior del • Ataxia dinámica. Dismetría que se evidencia
acueducto de Silvio), al que se le añade un síndro- por las maniobras índice-nariz, dedo-dedo,
me de Parinaud (limitación para la mirada conjuga- talón- rodilla, etc.
da hacia arriba, alteración de los reflejos de • Disdiadococinesia o adiadococinesia.
426
• Temblor intencional. ticularmente del tronco), con poca dismetría, mien-
• Asinergia. Se pone de manifiesto con las prue- tras que en las de los hemisferios hay mayor ataxia
bas de extensión del tronco, flexión combina- y dismetría ipsilateral, con menos alteraciones tóni-
da, prueba del arrodillamiento, etc. cas, estáticas y cinéticas.
• Discronometría.
• Alteraciones de la voz: Voz escandida, monó- Tumores del ángulo pontocerebeloso
tona, lenta; carece de modulación, silabeada. Representan entre el 8 y 10 % de todos los tumores
• Trastornos de la escritura. La escritura es angu- intracraneales y de las neoplasias que ocurren en
losa, desigual, no sigue una línea recta. esta región; alrededor del 80 % son neurinomas de
• Hipotonía. Se encuentra entre las perturbacio- VIII nervio craneal; el resto son meningiomas,
nes fundamentales de origen cerebeloso, la cual colestea- tomas y ependimomas,
se evidencia por la simple palpación, las prue- fundamentalmente.
bas de pasividad, la de Holmes-Stewart y los Como los neurinomas se originan en la rama
reflejos pendulares. vestibular del VIII nervio craneal, cerca del ganglio
• En relación con los movimientos de los ojos, de Scarpa, los síntomas iniciales son por lo general
en el cerebeloso aparecen movimientos anor- tinnitus, acufenos, dificultad para la discriminación
males (nistagmo), fundamentalmente en el plano de las palabras (sobre todo cuando el enfermo habla
horizontal, y ataxia para la mirada conjugada. por teléfono) y vértigos objetivos y subjetivos, que
• El signo de Romberg es negativo en el suelen ser ligeros y transitorios; a continuación se
cerebeloso, por cuanto su inestabilidad en la desarrolla una pérdida lenta y progresiva de la
posición de pie no empeora el cerrar los ojos; audi- ción, la cual puede acompañarse de cierto
cuando es positivo se aduce que hay compro- compro- miso del nervio facial, que se expresa por
miso de las conexiones vestibulocerebelosas. una paresia facial periférica discreta en sus inicios e
• Test mioquinético de Mira positivo. hipoestesia en el área de Ramsay-Hunt; a
continuación aparece una hiporreflexia o arreflexia
Tumores del vermis cerebeloso y IV ventrículo corneal como primera manifestación de
Las lesiones situadas en la línea media de la fosa compresión de las fibras del trigémino.
posterior comprometen habitualmente tanto al vermis
Se ha señalado por muchos autores que en la
como al IV ventrículo, lo cual hace muy difícil su
prác- tica, en los neurinomas específicamente, a la
diferenciación clínica; además, con la excepción del
meduloblastoma en el niño, las lesiones cerebelosas pérdi- da de la audición sigue la hiporreflexia
por lo común dan manifestaciones combinadas de corneal, antes de que la lesión del facial sea
vermis y hemisferio. La ataxia de tronco constituye objetiva desde el pun- to de vista clínico. Una vez
el signo cardinal de las lesiones vermianas; en ellas que el tumor ocupa el ángulo pontocerebeloso,
el SHI es muy precoz y los vómitos pueden consti- aparecen signos de disfun- ción vestíbulo-
tuir el elemento inicial y más importante, como su- cerebelosa, tales como nistagmo, al- teraciones de
cede con el ependimoma del IV ventrículo. Hay la marcha y los restantes elementos de un
atonía marcada, y en la posición de pie y sentado el hemisíndrome cerebeloso homolateral.
enfermo oscila de manera constante, con tendencia a En estadios más avanzados, el desplazamiento del
la propulsión o retropulsión; la dismetría de los tallo origina mal funcionamiento de las vías largas,
miembros es ligera. hidrocefalia, etc.; cuando el tumor se extiende
En estadios avanzados, si el tumor comprime el hacia abajo, compromete los nervios craneales
tallo cerebral, origina las llamadas crisis o ataques bajos (so- bre todo el IX y X), y al extenderse
cerebelosos, que se manifiestan por episodios tran- hacia arriba, la compresión del trigémino da lugar
sitorios de hiperextensión brusca de la cabeza y las
a hipoestesia de la hemicara y disfunción del VI
extremidades, con arqueamiento del tronco
nervio craneal, lo que ocasiona diplopia.
(cerebellar fits).
El diagnóstico precoz de estos tumores influye
En resumen, en las lesiones del vermis predominan
la hipotonía y la ataxia estática y dinámica (par- grandemente en su pronóstico; los potenciales evo-
cados auditivos del tallo cerebral, la RMN y la
TAC han resultado de un valor inestimable en este
sentido.
427
Tumores del tallo cerebral entonces se le añade una disfunción de este
Son más frecuentes en los niños con un pico de inci- ner- vio contralateral a la lesión.
dencia entre los 5 y 8 años, pero también se ven en • Parálisis uni o bilateral del IV nervio craneal.
adultos a cualquier edad; los gliomas, básicamente • La hidrocefalia secundaria a tumores de dife-
del tipo de los astrocitomas, son los más comunes, rentes localizaciones puede causar un síndro-
seguidos de glioblastomas, gangliomas y epen- me de Parinaud semejante a los tumores de la
dimomas. glándula pineal y ocasionalmente compresión
El cuadro típico de estos tumores se caracteriza del quiasma y sufrimiento del hipotálamo, lo
por la toma ipsilateral de nervios craneales (la pará- que da lugar a defectos campimétricos y sínto-
lisis combinada del VI y VII es la más común), mas endocrinos, y remeda un tumor
acom- pañada de disfunción de las vías largas supraselar, o a trastornos de la marcha como
(sensitivas y motoras) contralateral; la afectación el observado en las lesiones cerebelosas.
de los pe- dúnculos cerebelosos añade con • Las lesiones del lóbulo frontal presentan a ve-
posterioridad ele- mentos en esta esfera. La ces ataxia y otros signos cerebelosos.
hidrocefalia y los síntomas de hipertensión
intracraneal aparecen de forma tar- día. A medida
que la lesión —generalmente de evo- lución lenta— Síndrome de hipertensión intracraneal
avanza, se presentan signos bilaterales del tronco El cráneo del adulto es un recinto prácticamente rí-
cerebral. El problema clínico fundamen- tal consiste gido y su contenido está formado por el encéfalo, la
en saber diferenciar estas neoformacio- nes de las sangre del lecho vascular y el LCR, tres componen-
enfermedades desmielinizantes (esclerosis múltiple), tes casi incompresibles, por lo que un aumento de
de los accidentes vasculares encefálicos y de las volumen de uno de ellos tiene que ser compensado
malformaciones vasculares. con la disminución de uno o más de los otros
Estos tumores asientan con mayor frecuencia en (teoría de Monro-Kellie). La presión intracraneal,
la protuberancia y el mesocéfalo, y dentro de los medida en condiciones basales en un sujeto en
distintos síndromes con que se manifiestan, el de decúbito lateral a nivel del fondo de saco dural,
Millard-Gubler (parálisis facial periférica y del mo- es de 100 a 150 mmH2O, aunquen se aceptan
tor ocular externo del mismo lado de la lesión, con
cifras hasta de 200 mmH2O.
una hemiparesia o hemiplejía contralateral) es uno
de los más comunes. Al desarrollarse un tumor intracraneal, se añade
un nuevo volumen a los fisiológicamente existen-
Signos de falsa localización o falsos tes, lo cual puede ser compensado de forma inicial
por el mecanismo antes explicado (capacidad de
signos de localización amortiguación); pero superados esos límites, la pre-
Los tumores intracraneales, al comprimir o infiltrar sión dentro del cráneo se eleva y se presenta enton-
las estructuras vecinas, provocan signos locales como ces un SHI.
los ya descritos, pero también producen desplaza- El aumento de la presión en los tumores intracra-
mientos mecánicos y distorsiones de estructuras dis- neales es causado por uno o más de los siguientes
tantes (efectos secundarios), lo que causa falsos mecanismos:
signos de localización. Tales son:
1. El efecto de masa del tumor.
• Parálisis uni o bilateral del VI nervio craneal, 2. El edema cerebral asociado.
el más frecuente de todos. 3. La obstrucción de las vías de circulación del
• En ocasiones, la lesión expansiva de un hemis- LCR.
ferio provoca el desplazamiento de las estruc- 4. La obstrucción del sistema de drenaje venoso
turas de la línea media y el pedúnculo cerebral del encéfalo.
contralateral se impacta contra el borde libre 5. La obstrucción del mecanismo de reabsorción
de la tienda del cerebelo, lo que ocasiona un del LCR.
defecto motor y signo de Babinski del mismo
lado de la lesión (signo de Kernoham); si ade- El cuadro clínico del SHI se caracteriza por la
más también comprime el III nervio craneal, clásica tríada de cefalea, vómitos y papiledema.
428
Cefalea. Está presente en casi todos los casos en Resulta importante para el clínico conocer que:
algún momento de la enfermedad; al inicio es tran-
sitoria y luego continua, con exacerbaciones y acom- • La disminución de la agudeza visual suele ser
pañada de sensación de peso (gravativa). Es rebelde mínima, aun con un papiledema crónico seve-
a los analgésicos. Se empeora al acostarse y mejora ro; sin embargo, ocasionalmente se desarrolla
al sentarse o ponerse de pie; se agrava en todas las una ceguera de instalación rápida (a veces en
ocasiones en las que se dificulta el drenaje venoso menos de 24 h). De forma habitual la visión se
del encéfalo, como la tos, el estornudo, los esfuerzos reduce sólo al final, hasta llegar a la ceguera
físicos, bajar la cabeza, etc. Con frecuencia despier- con el estado de atrofia óptica.
ta al enfermo durante el sueño y en otras ocasiones • A veces hay diferencia en el grado de edema
es más intensa al despertar en la mañana; los episo-
en cada ojo, sin que ello tenga valor como
dios de visión borrosa acompañando a la cefalalgia
son referidos por algunos pacientes. signo localizador.
Vómitos. Son menos frecuentes y acompañan a • Una vez que se ha establecido el SHI, el
menudo a la cefalea, a la cual a veces calman duran- tiempo que transcurre para la instalación del
te un tiempo; pueden aparecer en el acmé de los pa- papilede- ma varía según que la hipertensión
roxismos de la cefalalgia. Clásicamente es describen intracraneal se haya producido de forma
con las características del vómito central, sin pró- rápida o lenta; en el primer caso los signos de
dromos, sin náuseas, en proyectil, sin sudoración ni estasis papilar por lo general se aprecian en 18
taquicardia; sin embargo, en la práctica no siempre o 24 h, pero en el segundo, pueden ser
sucede así. necesarios de 6 a 8 días para que se
Papiledema. El papiledema es la tumefacción no desarrolle el papiledema.
inflamatoria de la cabeza del nervio óptico (también
llamado disco o papila), cuya patogenia es atribuida La hipertensión intracraneal se manifiesta, ade-
a la obstrucción del flujo exoplásmico lento en las más de por la tríada descrita, por otras alteraciones
fibras del nervio óptico; el aumento de la presión que se señalan a continuación:
intracraneal se trasmite a través del LCR contenido
en el espacio subaracnoideo que envuelve el nervio 1. Alteraciones de la actividad nerviosa superior.
óptico, ya que la duramadre que lo reviste es inex- Comienzan por una dificultad para la concen-
tensible. Lo primero que se produce en el fondo del tración, bradipsiquia y confusión, que evolucio-
ojo es la pérdida del latido venoso fisiológico, se- nan hacia un deterioro del nivel de conciencia.
guidamente tiene lugar una congestión venosa y la 2. Bradicardia. La disminución de la frecuencia
papila adquiere una coloración más rosada (hipere- cardíaca es muy común en el SHI de instala-
mia); a continuación comienza a desaparecer la ex- ción rápida, pero menos en el de instalación
cavación fisiológica y a borrarse los bordes papilares, lenta, como en los tumores cerebrales.
borramiento que se inicia por el nasal, continúa por 3. Elevación de la presión arterial. Se comporta
el polo superior o inferior y, por último, afecta al igual que la bradicardia en relación con la ve-
borde temporal. En lo adelante, el plano de la papila
locidad de aparición del SHI.
se va elevando en relación con el del resto de la re-
4. En las hipertensiones rápidas hay aumento de
tina, hasta una altura que a veces llega a 8 o 10
dioptrías. Los vasos que atraviesan la papila se ven la amplitud del ritmo respiratorio y disminu-
incurvarse para subir o bajar al límite de ésta; en ción de la frecuencia, capaz de llegar hasta la
estadios avanzados aparecen hemorragias peri- respiración de Cheyne-Stokes. Esta alteración
vasculares y exudados algodonosos. Si la hiperten- es infrecuente en las hipertensiones lentas.
sión intracraneal persiste, el edema evoluciona hacia 5. No es raro encontrar vértigos ni la presencia
la atrofia óptica, en cuyo caso la papila se aplana de convulsiones.
nuevamente y palidece. 6. En los niños y jóvenes pueden apreciarse
El papiledema produce agrandamiento de la man- diastasis de las suturas craneales.
cha ciega y disminución concéntrica del campo vi- 7. Lesión de pares craneales, fundamentalmente
sual. del VI, y con menor frecuencia del III y IV.
429
Exámenes complementarios nóstico de neurinomas del acústico en estadio intra-
Radiografía simple de cráneo. Se encuentra lo si- canalicular.
guiente: Potencial evocado visual (PEV). Útil para las le-
siones del nervio óptico, tumores craneorbitarios y
1. Alteraciones óseas características. Ejemplo: de la región selar y su vecindad.
modificaciones en los diámetros de la silla tur- Mapeo cerebral (EEG con métodos de análisis
ca, destrucción del clivus, etc. cuantitativo). Útil en los tumores supratentoriales.
2. Opacificaciones espontáneas intratumorales. Estimulación magnética transcraneal (EMT).
3. Alteraciones sospechosas de un proceso loca- Permite explorar la vía eferente piramidal.
lizado. Ejemplo: osteólisis, hiperostosis, etc. Potenciales evocados relacionados con eventos
4. Desviaciones de la glándula pineal. cognitivos (P-300,CNV, N 400). Permiten caracteri-
5. Desviaciones de otras estructuras calcificadas. zar las funciones cognitivas en pacientes con lesio-
6. Síndrome óseo de hipertensión intracraneal. nes corticales.
a) Modificaciones de la silla turca. Tomografía axial computadorizada. La TAC re-
b) Diastasis de suturas. sulta útil para el diagnóstico de prácticamente
c) Aumento de las impresiones digitiformes. todos los tumores intracraneales (Figs. 40.4 y 40.5)
d) Alteración de las impresiones vasculares. y su- pera a la RMN en la definición de
e) Atrofia difusa de los huesos del cráneo. calcificaciones y en la evaluación del compromiso
de las estructuras óseas y de las hemorragias
Punción lumbar. Está formalmente contraindica- intratumorales. Los tu- mores metastásicos que
da ante la sospecha de un tumor cerebral, pues pue- producen destrucción ósea
de provocar el enclavamiento uni o bilateral del
uncus del hipocampo a través de los pilares del
tentorio o de las amígdalas cerebelosas en el aguje-
ro occipital (foramen magnum). Este proceder debe
reservarse sólo para pacientes con síntomas de com-
promiso meníngeo, tumores capaces de diseminarse
a través del LCR o para descartar una sepsis del SNC,
siempre y cuando de forma previa se haya estable-
cido un control de la presión intracraneal.
Electroencefalograma (EEG). Con el desarrollo
de las técnicas imagenológicas modernas, su papel
en el diagnóstico de los tumores cerebrales ha pasa-
do a un segundo plano. No obstante, el EEG ayuda
en la localización del sitio de la lesión en enfermos
en que aún no hay manifestaciones clínicas de hi-
pertensión intracraneal.
Estudios neurológicos. La repercusión funcional
de las lesiones tumorales del SNC puede ser deter-
minada con precisión mediante el registro de varias
técnicas neurofisiológicas, como los potenciales evo-
cados, el EEG con técnicas de mapeo cerebral y la
estimulación magnética transcraneal. Estas técnicas
se utilizan con fines diagnósticos preoperatorios,
pero también en el transoperatorio y en el posopera-
torio para conocer la magnitud de las secuelas y va-
lorar la rehabilitación.
Potencial evocado auditivo de tallo cerebral
(PEATC). Técnica altamente sensible para el diag-
Fig. 40.4. TAC. Imagen hipodensa de aspecto quístico en la
fosa posterior (astrocitoma quístico).
430
hematoencefálica y puede ser utilizada en pa-
cientes alérgicos al yodo y en los que presen-
tan insuficiencia renal crónica.
• Metástasis muy pequeñas que escapan de la
TAC, son demostrables por RMN con gadoli-
nium.
• La angio-resonancia permite visualizar el
árbol vasculocerebral y está llamada a
convertirse en la sustituta de las técnicas
angiográficas actuales.
Angiografía por sustracción digital (ASD). Con-
siste en la manipulación computadorizada de las
imágenes angiográficas al momento, lo que permite
la sustracción de las estructuras óseas y otros teji-
dos, para conseguir imágenes libres de
interferencias, con dosis mínima de contraste. El
contraste se in- yecta por vía EV o arterial. Por vía
EV periférica se obtienen imágenes menos
definidas, pero su reali- zación es más simple y
libre de complicaciones. Tomografía por emisión
de positrones (PET). La imagen obtenida en la PET
refleja más el estado de procesos metabólicos que
las estructuras anatómi- cas, por lo que resulta de
interés en el estudio de la biología de los tumores y
permite diferenciar recidi-
vas tumorales de la necrosis posradiación.
Tomografía por emisión de fotón único (SPET).
Fig. 40.5. TAC. Gran masa tumoral hiperdensa frontal derecha Es una técnica más barata y sencilla que la PET;
parasagital, con microcalcificaciones (meningioma). sirve para el estudio de la perfusión cerebral y de la
actividad metabólica tumoral, y también para dife-
son mejor identificados por la TAC. Otra de sus gran- renciar recidivas tumorales de áreas de
des ventajas es su utilización como guía para la ci- radionecrosis. Gammagrafía cerebral. En sitios
rugía estereotáxica. Es necesario recordar que la TAC donde no se dis- ponga de los medios
es un método invasivo por cuanto resulta de la ex- anteriormente descritos, ayuda a aproximarse en el
posición a los rayos X y sus imágenes adquieren diagnóstico diferencial de algu-
una mayor resolución cuando se hace contrastada nos tumores cerebrales.
con yodo.
Resonancia magnética nuclear. La RMN es el Diagnóstico anatomopatológico
estudio óptimo para la mayoría de los tumores cere-
• Microscopia óptica.
brales y sus principales ventajas sobre la TAC son
las siguientes: • Microscopia electrónica.
• Cultivo de tejidos.
• La relación del tumor con estructuras anatómi- • Inmunohistoquímica.
cas pequeñas es mejor visualizada que en la
TAC. Diagnóstico
• Es superior para el diagnóstico de las lesiones El diagnóstico de los tumores intracraneales se basa
de la fosa posterior, al suprimir los artefactos en el cuadro clínico con sus signos de localización
del hueso. y las manifestaciones de hipertensión intracraneal,
• Contrastada con gadolinium, es más sensible y en el aporte de las investigaciones
en la demostración de defectos en la barrera complementarias. Tienen valor para el diagnóstico
una historia previa negativa de convulsiones,
trastornos psíquicos, in- gestión de tóxicos y
alcoholismo. Toda pérdida

431
progresiva de una función nerviosa de localización Cirugía estereotáxica moderna. Método moder-
encefálica, debe hacer presumir un tumor intracra- no basado en la localización por TAC del sitio
neal, y si a este elemento focal se añaden manifesta- exac- to de la lesión y que permite la toma de
ciones de hipertensión intracraneal, existen todos los muestras para biopsia y extirpación de lesiones
elementos para plantear su diagnóstico. otrora ina- bordables, con un mínimo acceso y
El diagnóstico diferencial debe establecerse con baja morbi- mortalidad.
todas aquellas lesiones encefálicas que producen Laser (light amplification by the stimulated
hipertensión intracraneal con signos focales, como emission of radiation). Se utiliza en la extirpación
los hematomas, abscesos, quistes parasitarios, me- de tumores profundos: del ángulo pontocerebeloso,
ningoencefalitis, granulomas, tuberculomas, etc. supra y paraselares, del tallo cerebral y para la coa-
También debe hacerse con la epilepsia, accidentes gulación de lesiones muy vascularizadas.
vasculares encefálicos, seudotumor cerebral y todos Aspiración ultrasónica (cavitron ultrasonic
aquellos procesos que ocasionan convulsiones, pa- aspirator [CUSA]). El CUSA está indicado para la
piledema, demencia, etc. resección de meningiomas, neurinomas, gliomas y
craneofaringiomas, y es especialmente útil en
Pronóstico tumo- res intraxiales del cerebelo, tallo cerebral e
Depende de la histología, características biológicas intrame- dulares.
del tumor, localización y tamaño. Las técnicas ac- Radiocirugía (unidad gamma o gamma-knife).
tuales de imagenología, neurofisiología y otras han Es una modalidad de tratamiento utilizada en
influido sustancialmente en la precocidad del diag- malfor- maciones vasculares y tumores benignos de
nóstico, lo que mejora el pronóstico. Un diagnósti- pequeño tamaño (menores de 3 cm). Consiste en la
co precoz y un tratamiento quirúrgico adecuado, destruc- ción de la lesión por medio de múltiples
pueden ser curativos en los tumores benignos (me- haces de radiación ionizante, convergentes y
ningiomas, neurinomas y otros), así como en algu- aplicados en una sola sesión.
nos gliomas de bajo grado de malignidad asequibles Criocirugía.
al procedimiento neuroquirúrgico. Las técnicas mo- Neuroendoscopia.
dernas de tratamiento han prolongado la superviven- Otras modalidades terapéuticas
cia, pero en sentido general, el pronóstico de los Radioterapia convencional. Permanece como el
tumores malignos sigue siendo malo. mejor coadyugante de la cirugía para el tratamiento
de los astrocitomas malignos. El hiperfraccionamiento
Tratamiento de las dosis por día parece ofrecer algunas ventajas.
El tratamiento de los tumores intracraneales resulta Braquiterapia intersticial. Útil para el tratamien- to
en su mayoría competencia del neurocirujano y del de tumores pequeños; consiste en la implantación
oncólogo, con la excepción de los adenomas hipofi- intratumoral de isótopos radiactivos (I125 o iridio
sarios y de las metástasis, donde se requiere del tra- I192). Se obtienen similares resultados a los
bajo multidisciplinario con el endocrinólogo y el alcanzados con la unidad gamma o con el
clínico, respectivamente. No obstante, consideramos acelerador lineal de
necesario que el internista conozca el arsenal dispo- partículas.
nible en estos momentos, pues los nuevos procede- Radioterapia con partículas pesadas.
res han ido desplazando las técnicas quirúrgicas Tratamiento de los gliomas mediado por virus
habituales. (viral mediated genetherapy for gliomas).
432
41
TUMORES ESPINALES
Los tumores espinales son considerablemente me- c) Tumores extramedulares extradurales. General-
nos frecuentes que los cerebrales y constituyen sólo mente son neurinomas y meningiomas,
entre 15 y 25 % de todas las neoplasias que afectan pero también se hallan sarcomas, carcinomas
el sistema nervioso. Se originan del parénquima de metas- tásicos, linfomas, mieloma múltiple,
la médula espinal, del plexo vascular vertebral o son angiomas, lipomas, cordomas, condromas,
metastásicos a partir de tumores en diferentes par- tuberculomas, gomas sifilíticos, etc.
tes del organismo.
Cuadro clínico
Clasificación La localización del tumor determina por lo general
1. Topográfica. Según se originen en la propia el carácter de las manifestaciones clínicas, sobre
sustancia de la médula espinal o en las estruc- todo las iniciales. No obstante, lo más común es
turas que se encuentran por fuera de ésta, los que los enfermos presenten un cuadro deficitario
tumores espinales se clasifican en intramedu- lentamen- te progresivo, caracterizado por:
lares y extramedulares, respectivamente. Aten-
diendo a la posición que los tumores 1. Síntomas motores de tipo deficitario, en forma
extramedulares ocupan en relación con la du- de paraparesia o paraplejía espástica, lo que
ramadre, éstos son ser intradurales o extradu- denuncia la instalación progresiva y creciente de
rales; los primeros se encuentran por dentro de la lesión, cuyo límite depende de la localiza-
la duramadre y los segundos, por fuera de ésta. ción del trastorno en el sentido longitudinal.
En un hospital general, la frecuencia relativa Existe hipertonía, hiperreflexia
de los tumores espinales en sus diferentes lo- osteotendinosa, disminución o abolición de
calizaciones es aproximadamente de 5 % para los reflejos cuta- neoabdominales y
los intramedulares, 40 % para los extrame- disminución progresiva de la fuerza muscular.
dulares intradurales y 55 % para los extradu- Aquí llama la atención, una vez instalada la
rales. paraplejía, la nitidez de los re- flejos de
2. Histológica automatismo medular.
a) Tumores intramedurales. Los más comunes 2. Síntomas radiculares, como dolores, pareste-
son los ependimomas, astrocitomas, sias y disestesias, más marcados del lado de la
hemangiomas y hemangioblastomas. Tam- lesión y cuando el enfermo se acuesta, caracte-
bién se encuentran, con menor frecuencia, rísticos de las localizaciones extramedulares.
oligodendrogliomas, meduloblastomas, Estos síntomas se exacerban con la tos, el es-
neurinomas, carcinomas metastásicos pro- tornudo y el esfuerzo al defecar, y no se
cedentes de mama o pulmón, lipomas, alivian con el reposo.
teratomas, etc. 3. Síntomas sensitivos, que se caracterizan gene-
b) Tumores extramedulares intradurales. Los ralmente por adoptar la forma de una hipoeste-
más comunes son los neurinomas, menin- sia o anestesia a todas las modalidades de la
giomas, carcinomas metastásicos, linfomas sensibilidad por debajo del sitio de la lesión
y sarcomas. (nivel sensitivo). Puede ser también una diso-
ciación de la sensibilidad, casi siempre de tipo

433
siringomiélico, en el caso de los tumores intra- una cuadriparesia o cuadriplejía, ya que los
medulares. segmen- tos medulares cervicales son los
4. Trastornos esfinterianos, que aparecen por lo responsables de la inervación de los miembros
común tardíamente, salvo cuando la lesión superiores. Es impor- tante también apuntar que
asienta en el cono medular, en cuyo caso son una instalación de los sín- tomas y signos
muy precoces. lentamente progresiva corresponde a tumores
5. Trastornos simpáticos, caracterizados por alte- primarios, mientras que la instalación agu- da
raciones de la circulación periférica con frial- denuncia la aparición de una metástasis, casi siem-
dad y cianosis de los miembros inferiores, pre procedente de pulmón, mama o próstata.
abolición de la sudoración y del reflejo pilo- Es útil recordar aquí las relaciones recíprocas
motor por debajo del nivel de la lesión; los tras- exis- tentes entre los diferentes segmentos
tornos tróficos y las úlceras de decúbito son de medulares, los cuerpos vertebrales y la superficie
aparición frecuente. corporal, para poder determinar correctamente el
sitio de la lesión según el límite superior del nivel
En resumen, se puede decir que las manifestacio- sensitivo. La co- lumna vertebral del adulto mide
nes clínicas de los tumores espinales dependen mu- 70 o 75 cm de lar- go, mientras que la médula
cho de la localización de la lesión y que adoptan en espinal alcanza una longitud de sólo 43 o 45 cm y
general la forma de un síndrome de lesión de las termina a nivel de la segunda vértebra lumbar; esto
vías espinales sensorimotoras, un síndrome doloro- provoca que los seg- mentos medulares no estén
so radicular o un síndrome siringomiélico. situados con exactitud a la altura de su cuerpo
Resulta de interés conocer algunas de las caracte- vertebral correspondiente y la distancia entre ellos
rísticas distintivas de los tumores propios del sistema aumente según se avanza en sentido caudal. Así,
nervioso de aparición más frecuente. Los meningio- ante un nivel sensitivo a la altu- ra de los arcos
mas son más comunes entre los 30 y 50 años, tienen crurales, la lesión estará ubicada en el segmento
preferencia por las mujeres en una proporción medular D12, que se encuentra detrás del cuerpo
de 4:1 y en el 60 % de los casos ocurren en la región de la vértebra D10. Si el nivel sensitivo se halla a
torácica o dorsal; son tumores benignos con una lar- la altura del ombligo, estará lesionado el segmento
ga evolución antes de que se haga el diagnóstico. medular D10, situado detrás de la vérte- bra D8. Si
Los neurinomas también aparecen más frecuen- el nivel se encuentra a la altura del apén- dice
temente entre los 30 y 50 años, con ligero predomi- xifoides, la lesión está en el segmento medular D7,
nio en las mujeres. Su localización fundamental es ubicado detrás de la vértebra D6. Una afecta- ción
la dorsal, seguida de la cervical y lumbar. Alrededor del segmento medular D4 se proyecta a la altu- ra
del 70 % son extramedulares intradurales; el 14 %, de las tetillas, mientras que dicho segmento está
extradurales; otro 14 %, intraextradurales, y sólo detrás del cuerpo de la vértebra D3. Por último, un
el 1 o 2 % son intramedulares. nivel sensitivo a la altura de la clavícula orienta ha-
Los ependimomas y astrocitomas son los tumo- cia una lesión del segmento medular C4, situado
res intramedulares más comunes; provocan un sín- por detrás de los cuerpos vertebrales C3 y C4.
drome de compresión medular progresivo. Mientras Exámenes complementarios
el ependimoma es más frecuente en las regiones
cervicodorsal y dorsolumbar, y afecta de manera Estudio del LCR. Posee un gran valor diagnóstico;
fundamental a hombres mayores de 50 años, el es característica la obstrucción parcial o total de la
astrocitoma asienta de preferencia en la médula cer- circulación del LCR por el bloqueo del canal
vical y en ocasiones toma una apariencia quística, raquídeo, evidenciado por las maniobras dinámicas
por lo que se confunde con la siringomielia; es un (Queckenstedt, Stookey). La presión está normal o
tumor de la infancia y la adolescencia. disminuida. El aspecto macroscópico y el estudio
Por supuesto que la clínica del enfermo depende- citoquímico revelan frecuentemente un líquido xan-
rá también de la altura de la lesión, ya que si ésta se tocrómico que coagula con facilidad, con aumento
encuentra a nivel dorsolumbar, habrá una paraparesia de las proteínas y escasas células (disociación
o paraplejía, pero si está a nivel cervical, provocará albúmino-citológica), elementos éstos que caracte-
rizan el llamado síndrome de Froin. En el 15 % de
los casos o más se ve una celularidad incrementada,
434
entre 25 y 100 células/mm3. El estudio citológico, es el caso del mieloma múltiple, linfomas,
por su parte, revelará en ocasiones la presencia de sarcomas, carcinomas en sus diferentes
células neoplásicas localizaciones (prósta- ta, mama, riñón, pulmón,
Radiografía simple. Realizada en las diferentes tubo digestivo, tiroides), tuberculosis, sífilis,
posiciones (anteroposterior, lateral y oblicuas), mos- SIDA, etc.
trará en el 15 % de las oportunidades o más la pre- No obstante estas dificultades diagnósticas, es útil
sencia de destrucción localizada de cuerpos recordar algunas características diferenciales entre
vertebrales, cambios en el contorno de los pedículos los tumores intramedulares y los extramedulares,
vertebrales, ensanchamiento localizado del diáme- que aparecen resumidas en el cuadro 41.1.
tro del canal vertebral evidenciado por aumento de Los tumores intramedulares son más frecuentes
la distancia interpedicular y del diámetro de los agu- en la infancia y la adolescencia; comprometen va-
jeros de conjunción, proliferación ósea, calcificacio- rios segmentos medulares, a veces toda la médula
nes, etc. espinal. En dependencia de su localización en el
Mielografía. Realizada sola o en combinación con sen- tido transversal, provocan un síndrome
la TAC o con la RMN. Utilizando contraste radioló- siringomié- lico si están ubicados alrededor
gico hidrosoluble, la mielografía evidencia defectos del conducto ependimario, un síndrome de
de lleno en la columna de contraste o su detención motoneurona inferior si afectan las astas anteriores,
total en el sitio del tumor. En la actualidad ha sido etc. Por su parte, los tumores extramedulares son
prácticamente sustituida por la RMN. más comunes en el adul- to. Causan síntomas y
RMN y TAC. El estudio más útil para evaluar los signos de compresión que se inician por lo general
tumores espinales de cualquier localización es la con dolores y parestesias por compromiso de las
RMN, la cual destaca de manera nítida los cuerpos raíces posteriores, y luego se van extendiendo
vertebrales, el canal medular y la propia médula es- hacia la médula espinal progresando desde la
pinal. Al inyectar contraste radiológico, aumenta de periferia hacia el centro y ocasionando en su
forma considerable su positividad, ya que la mayo- crecimiento hiperreflexia, espasticidad, disminu-
ría de los tumores espinales captan el contraste y se ción de los reflejos cutaneoabdominales, trastornos
observan más fácilmente. La TAC tiene limitacio- del control vesical, debilidad y compromiso sensiti-
nes con respecto a la RMN; no obstante, es útil para vo. Por lo general, los signos iniciales están confi-
observar las alteraciones en los cuerpos vertebrales nados a unos pocos segmentos medulares
y, además, muchos tumores, sobre todo los extra- contiguos. También es necesario establecer el
medulares, pueden ser apreciados en este estudio diagnóstico diferencial de los tumores espinales
siempre que se utilice contraste por vía EV. con procesos capaces de simularlos, tales como
Potenciales evocados somato-sensoriales (PESS). la aracnoiditis quística, siringomielia, abscesos
En su porción periférica pueden mostrar degenera- epidurales, hernias discales, esclerosis múltiple,
ción axonal, degeneración segmentaria o ambas. Sin mielitis transversa, es- clerosis lateral amiotrófica,
embargo, lo más significativo es la prolongación del malformaciones arterio- venosas espinales,
tiempo de conducción central o incluso abolición de malformaciones de la región craneoespinal, etc.;
la respuesta si hay una interrupción de la vía. Su afecciones todas capaces de cur- sar con
mayor utilidad es en los tumores intramedulares. manifestaciones clínicas semejantes a las
Diagnóstico descritas y cuya identificación resulta en ocasiones
bastante difícil de establecer.
Una vez confirmada la presencia de un tumor espi-
nal con el cuadro clínico y los exámenes comple- Pronóstico
mentarios señalados, se debe tratar de precisar si es
En los tumores malignos el pronóstico es general-
intramedular o extramedular, lo cual en la práctica
mente malo. En los neurinomas y meningiomas el
resulta difícil en muchas oportunidades, salvo cuan-
pronóstico es bueno, pero aun en estos casos con
do existan lesiones vertebrales evidentes responsa-
cierta frecuencia pueden quedar secuelas, como
bles del cuadro espinal o una causa conocida, como
paraparesias, trastornos radiculares, etc. En la ac-
tualidad, las modernas técnicas de microcirugía han
mejorado de forma extraordinaria el pronóstico
fun- cional de estos enfermos.
435
CUADRO 41.1
DIFERENCIAS MÁS SIGNIFICATIVAS ENTRE LOS TUMORES EXTRAMEDULARES E INTRAMEDULARES

Índices Tumores extramedulares Tumores intramedulares


Frecuencia. 95 %. 5 %.
Dolor por compresión radicular. Frecuente, precoz, bilateral. Infrecuente.
Espasticidad. Frecuente. Durante un tiempo largo no hay espas-
ticidad.
Trastornos de la sensibilidad. Anestesia total, límite superior preciso con Anestesia termoalgésica de tipo
nivel de anestesia. siringomiélico. Carácter impreciso en su
límite superior; a veces éste asciende
por el crecimiento del tumor.
Trastornos esfinterianos. La micción se altera tardíamente. La micción se altera tempranamente.
Enfermedades sistémicas Frecuente. No existen.
asociadas.
Alteraciones del LCR.
• Queckenstedt +. Temprano. Tardío.
• Síndrome de Froin. Temprano. Tardío.
• Presión. Aumentada. Normal.
Alteraciones radiológicas Frecuentes. Infrecuentes.
vertebrales.

Mielografía. Positiva; detención del contraste y fácil Negativa; frecuente paso normal del
de precisar. contraste.
RMN. Destaca con nitidez las vértebras, el canal Destaca con nitidez las vértebras, el
medular y la médula. canal medular y la médula.
TAC. Útil para observar las vértebras. Tiene limitaciones.
Potenciales evocados. Menor utilidad. Mayor utilidad
Pronóstico. Meningiomas y neurinomas (bueno); Malo.
carcinomas (malo).
Tratamiento
El tratamiento es quirúrgico en todos los casos y en quirúrgica, hay que hacer un tratamiento rehabilita-
algunas variedades, como el astrocitoma, debe ser dor prolongado que permita la máxima recuperación
combinado con radioterapia. Luego de la intervención funcional posible del enfermo.

436
42
TRAUMATISMOS CRANEOENCEFÁLICOS
Y RAQUIMEDULARES
Los traumatismos constituyen la epidemia de la ci- meníngeas, el cráneo o los tejidos blandos epicra-
vilización y se encuentran entre una de las primeras neales, por la acción de un agente vulnerante.
causas de muerte en Cuba y en los países desarro- Clasificación
llados.
Se han descrito múltiples clasificaciones para los
El estudio de los traumatismos craneoencefáli-
TCE, todas ellas con sus ventajas, desventajas y di-
cos (TCE) y raquimedulares (TRM) escapa habi-
ferentes enfoques; así, por ejemplo, cuando se divi-
tualmente al ámbito del internista, pero el hecho de
den en abiertos y cerrados, para algunos autores se
que en su gran mayoría son ellos —o el médico ge-
refiere a que haya o no herida de los tejidos blandos
neral o el de la familia— los que de forma inicial
epicraneales, en tanto que la mayoría de los textos
reciben y atienden a estos pacientes en los cuerpos
especializados asumen como TCE abierto aquel en
de guardia, y teniendo en cuenta que en los TCE
que hay una comunicación directa entre la
graves la mortalidad es inversamente proporcional
laceración epicraneal y el encéfalo, el cual requiere
al tiempo transcurrido entre el traumatismo y el inicio
tratamiento quirúrgico de urgencia.
del tratamiento, y la gran frecuencia con que los
Con fines prácticos, se clasifican de acuerdo con
enfermos presentan complicaciones precoces car-
su severidad y tipo de lesión:
diorrespiratorias en el caso de los TRM, resulta ne-
cesario que ellos estén preparados para prevenir o A. Según su severidad (escala de Glasgow para
controlar las complicaciones, que de no ser atendi- el coma):
das pronto y de manera adecuada, pueden resultar 1. Ligero
fatales. 2. Moderado
3. Severo
B. Según el tipo de lesión:
TRAUMATISMOS 1. Lesión de partes blandas.
2. Fracturas del cráneo.
CRANEOENCEFÁLICOS a. Bóveda.
• Lineales.
En los pacientes con traumatismos múltiples, la ca- • Deprimida.
beza es el sitio con más frecuencia afectado y en b. Base.
más de la mitad de las muertes causadas por ellos, • Piso anterior.
el craneoencefálico desempeña un papel importan- • Piso medio.
te en el resultado final. Por otro lado, la mortalidad • Piso posterior.
de los enfermos con TCE graves resulta mayor 3. Lesiones intracraneales.
del 50 % si no existe un diagnóstico y tratamiento a. Focales.
acertados tempranamente. • Hematoma epidural.
• Hematoma subdural.
Concepto • Hematoma intracerebral.
Se llama TCE a las lesiones que sufren el encéfalo • Otras: lóbulo temporal pulposo, higroma
(cerebro, tallo cerebral y cerebelo), sus cubiertas subdural y fracturas muy deprimidas.

437
b. Difusas. Según el tipo de lesión
• Conmoción. 1. Lesiones de las partes blandas epicraneales.
• Daño axonal difuso. Están presentes en prácticamente todos los
TCE y en ellas se encuentran áreas de
Según su severidad contusión, laceración, hematomas de las
Hasta 1974 se utilizaron disímiles términos para de- partes blandas o heridas.
finir el estado de la conciencia en los pacientes con 2. Fracturas del cráneo. Las fracturas en general
TCE. En dicho año, Teasdale y Jennett, con el obje- son expresión de un traumatismo de gran in-
tivo de unificar la terminología, elaboraron una es- tensidad, no obstante, es necesario señalar que
cala de predicción, la cual fue internacionalmente lo más importante es el grado de repercusión
aceptada para evaluar los enfermos con turbación sobre el encéfalo y no la extensión de la
de la conciencia, y que se basa en la valoración de
fractura.
las respuestas ocular, cerebral y motora de éstos. Se
conoce con el nombre de escala de Glasgow para el
Las fracturas craneales se dividen en:
coma (EGC) y se aplica como sigue:
a. De la bóveda. Son las más frecuentes, alrede-
dor del 70 % del total, y pueden ser lineales o
Mejor respuesta ocular: Espontánea ................ 4
Al estímulo verbal ..... 3 deprimidas; cuando uno de los bordes se des-
Al estímulo doloroso ..2 plaza hacia abajo, si la depresión es tal que
Sin respuesta .............. 1 rom- pe la duramadre, entonces se
Mejor respuesta verbal: Orientado y conversa.. 5 consideran penetrantes.
Desorientado y Las lineales sin repercusión neurológica sólo
conversa .................. 4 requieren observación especializada y se tornan
Palabras inapropiadas..3 más peligrosas cuando atraviesan los surcos
Sonidos incompren- vasculares. Las fracturas deprimidas cerradas,
sibles...........................2 cuyo desplazamiento no excede el grosor del
Sin respuesta .............. 1 cráneo, no requieren tratamiento quirúrgico en
Mejor respuesta motora: Obedece órdenes ...... 6 principio, en tanto las abiertas son una urgen-
Localiza el dolor ........ 5 cia para el neurocirujano.
Retirada en flexión .... 4 b. De la base. Representan alrededor del 30 %
Flexión anormal (rigi- del total y ocupan uno o más de los 3 compar-
dez de decorticación).. 3 timientos de la base; son difíciles de
Extensión (rigidez de diagnosti- car con los Rx convencionales y
descerebración) ......... 2 requieren entonces de una TAC con técnica
Sin respuesta ............. 1 de ventana ósea, por lo que en la práctica se
recurre a de- terminados signos clínicos para
Los enfermos evaluados por la EGC pueden al- hacer el diag- nóstico.
canzar una puntuación entre 3 y 15; los primeros Las fracturas de la fosa anterior se acompañan
tienen un coma fláccido y los últimos no presentan de equimosis en espejuelos, epistaxis y salida
alteración alguna de la conciencia. de LCR por las fosas nasales; a veces se
Partiendo de este puntaje, los pacientes con TCE se dañan los nervios olfatorios, ópticos y la
clasifican, según su severidad, de la forma siguiente:
primera rama del trigémino.
TCE severo: EGC: e/ 3 y 8 puntos.
En las del piso o fosa media es común obser-
TCE moderado: EGC: e/ 9 y 12 puntos.
var salida de sangre por el oído cuando se per-
TCE ligero: EGC: e/ 13 y 15 puntos.
fora la membrana timpánica o hemotímpano si
ella se mantiene íntegra; en horas o días poste-
Esta forma de evaluar la severidad del TCE no
está exenta de críticas, pero desde el punto de vista riores aparece una equimosis a nivel de la
práctico resulta muy útil por su sencillez y confor- mastoides (signo de Battle) y también pueden
midad. resultar lesionados el VII y VIII nervios cra-
neales.
438
Las fracturas de la fosa posterior se acompa- crito, y su confirmación se realiza con una TAC o
ñan de daño de los pares craneales bajos (X una angiografía, en ausencia de ésta.
al XII), cerebelo y tronco cerebral. Hematoma subdural
Las de la base que concomitan con salida de
LCR, deben considerarse complicadas, por el Es la colección de sangre en el espacio subdural, es
gran riesgo de infección del SNC. decir, entre la duramadre y la aracnoides. Son más
frecuentes que los epidurales y se encuentran en al-
3. Lesiones intracraneales. Pueden ser focales y rededor del 5 % de todos los TCE y en el 30 % de
los que son severos. Se producen por la ruptura de
difusas.
venas presentes entre la corteza y los senos de la
a. Lesiones focales: hematoma epidural,
duramadre, o por lesión de venas corticales en
subdural e intracraneal.
áreas de contusión y laceración cerebral
postraumáticas. El daño cerebral es mayor y su
Hematoma epidural pronóstico peor que el del epidural, con una
Se denomina así a la colección de sangre entre el mortalidad de alrededor del 60 %.
endocráneo y la duramadre; están asociados a las La velocidad de crecimiento del hematoma de-
fracturas lineales y se producen por lesión de los pende del calibre del vaso lesionado y en corres-
vasos meníngeos, sangramiento del hueso en el sitio pondencia con ese volumen se desarrolla el cuadro
fracturado o por daño de un seno venoso o vasos del clínico. Clásicamente se han dividido en: agudos,
diploe. Son relativamente infrecuentes, pero deben cuando los síntomas se desarrollan en las prime-
tenerse siempre en mente, pues constituyen una ras 24 h; subagudos, cuando aparecen al 2do. día y
emergencia neuroquirúrgica, donde los resultados hasta antes del mes (para otros autores es hasta
dependen en gran medida del estado neurológico en el 10mo. día), y crónicos, cuando se presentan des-
que sea operado el paciente. pués del mes del traumatismo.
El cuadro clínico del hematoma epidural típico En el hematoma subdural agudo el cuadro
es el de un paciente que al recibir un TCE pierde el clínico se caracteriza por un deterioro progresivo
conocimiento por un período breve, lo recobra de de la con- ciencia, acompañado de signos
forma total o parcial (período lúcido del hematoma deficitarios motores, por lo general
contralaterales; suelen presentarse convulsiones y
epidural) y comienza a aquejar cefalea que progresa
anisocoria. Se localizan con mayor frecuencia
en intensidad, vómitos y fotofobia, para después de
contralaterales al sitio del traumatismo, a
una o varias horas caer en un estupor que evolucio-
diferencia del epidural. En el hematoma subdural
na hacia el coma con la presencia de signos focales,
subagudo, el cuadro comienza con cefalea y los
habitualmente contralaterales, y parálisis del motor sig- nos se instalan más lentamente.
ocular común, por lo general del mismo lado del Los hematomas subdurales crónicos son más co-
hematoma, lo cual trae como resultado una anisocoria munes en sujetos con cierto grado de atrofia cere-
que progresará hacia la midriasis paralítica bilateral bral, como sucede en los ancianos, epilépticos y
si no se actúa con rapidez. alcohólicos. Por lo general el traumatismo no fue
Se encuentran también respiración estertorosa, hi- de gran envergadura y muchos pacientes no lo
pertensión arterial y bradicardia como expresión del recuer- dan o no existen antecedentes de éste; se
aumento de la presión intracraneal. El llamado pe- presentan también de forma espontánea en
ríodo lúcido es de duración variable, más corto cuan- ancianos con daño arteriosclerótico, consecutivo a
to más rápidamente crezca el hematoma, pero no es algunas enfermeda- des infecciosas, en pacientes
patognomónico de esta afección ni está siempre pre- afectados de eclamp- sia y en la poliarteritis
sente. nudosa.
Frente a todo paciente con fractura de cráneo y Después de transcurrido el período lúcido, co-
degradación de la conciencia, debe sospecharse el mienzan las manifestaciones clínicas, que son de la
hematoma epidural, cuyo tratamiento es siempre índole más variable, por lo cual es considerado el
quirúrgico. El diagnóstico está basado en la presen- gran simulador dentro de las enfermedades neuro-
cia de una línea de fractura y el cuadro clínico des- quirúrgicas; unas veces se presenta como un
síndro- me de hipertensión intracraneal, con signos
focales
439
o sin ellos, otras por cefalea progresiva acompaña- ces de provocar un efecto de masa tan importante
da o seguida de alteraciones de la conducta, trastor- como para desplazar la línea media y causar signos
nos del lenguaje, o como un AVE. focales. Son más frecuentes en los lóbulos frontales
Los hematomas subdurales crónicos se localizan y temporales por las características de la base del
habitualmente en la región parietal alta, a diferencia cráneo en esos sitios; el más típico de ellos es el
de los agudos, que son más frecuentes en la tempo- llamado lóbulo temporal pulposo. Estas lesiones
ral o temporoparietal y bilaterales hasta en un 25 % por lo general se comportarn igual que los
de los casos. hematomas yuxtadurales descritos.
El diagnóstico de certeza se realiza con una TAC,
RMN o, en su defecto, con una angiografía carotídea. b. Lesiones difusas. Adoptan dos formas clínicas:
El tratamiento de los hematomas subdurales 1. Conmoción cerebral. Será estudiada junto con
agudos y subagudos es médico-quirúrgico. Cuando los cuadros clínicos de las diferentes lesiones
tienen efecto de masa, se evacuan a través de la difusas que producen los TCE.
trepanación del cráneo. Los hematomas subdurales 2. Daño axonal difuso (DAD). Se incluyen bajo
crónicos son tributarios de tratamiento quirúrgico, este diagnóstico a todos aquellos pacientes
con resultados más alentadores que los anteriores. con coma prolongado postraumático, que no
Su mortalidad ronda el 15 % y a veces tienen re- tienen lesión focal o isquémica demostrada
cidivas. por TAC preferiblemente, y que se agrupan en
El higroma subdural es la colección de LCR nor- tres cate- gorías.
mal o xantocrómico en el espacio subdural, el cual Ligera. Es la menos frecuente. Coma de 6
es causado unas veces por un desgarro de la a 24 h; pasado este tiempo, el enfermo
aracnoides, que crea un mecanismo de válvula, don- obede- ce órdenes; tiene buen pronóstico.
de el líquido puede salir hacia el espacio subdural Moderada. Se presenta en el 45 % de todos
pero no regresar, y otras, por un mecanismo de los DAD. Coma mayor de 24 h, sin signos de
ósmosis. Produce un cuadro clínico similar al del disfunción del tallo cerebral.
hematoma subdural, pero su pronóstico generalmente Severo. Representa el 35 % de los DAD.
es más favorable. Coma profundo por tiempo prolongado,
fláccido o con signos de decorticación o de
Hematoma intracerebral descerebra- ción. Con frecuencia se
El sangramiento intracerebral postraumático es siem- acompaña de signos de disfunción
pre expresión de un impacto de gran intensidad; en autonómica, como HTA, hiper- hidrosis,
algunos casos se producen petequias y microhemo- arritmia respiratoria y bradifigmia o
rragias localizadas en la corteza o en zonas más pro- taquifigmia. El pronóstico de estos pacientes
fundas con áreas de edema local; laceración del tejido es sombrío y los que sobreviven presentan
cerebral con edema regional; áreas de isquemia o incapacidades severas.
infarto y hemorragia subaracnoidea, y hasta verda-
deros hematomas intracraneales con efecto de masa, Exploración del paciente con un TCE
por lesión de vasos arteriales o venosos. Los TCE Al producirse un TCE se establecen las llamadas
cerrados son más frecuentes en los lóbulos frontales lesiones de impacto o primarias, y a continuación
y temporales, y se presentan en menos del 2 % de se desencadena una serie de eventos que
los casos. Otras veces se asocian a heridas penetran- ensombrecen el pronóstico; son las llamadas
tes con ruptura de la duramadre y laceración cere- lesiones secundarias: hipoxia, isquemia y aumento
bral, como ocurre en las heridas por armas blancas de la presión intracra- neal, que sí pueden
o por proyectiles de armas de fuego. prevenirse en la misma medida en que el médico
El tratamiento de los hematomas intracraneales sea capaz de diagnosticarlas y tra- tarlas, cuanto
con efecto de masa es quirúrgico. más precozmente mejor. Pero el diag- nóstico
comienza con la anamnesis y el examen físico
Otras lesiones focales adecuados, y su objetivo inicial es tratar de
Como resultado de un TCE, se es raro que se pro- precisar si se está en presencia de una lesión focal,
duzcan áreas de contusión y edema localizado capa- que en principio requiere proceder quirúrgico, o de
una lesión difusa, cuyo tratamiento es médico.
440
En la anamnesis son imprescindibles el tipo y rición de reflejos patológicos resultan de valor
tiempo transcurrido desde el accidente, edad del loca- lizador; así el signo de Babiski expresa lesión
paciente, ingestión de alcohol y otras drogas. de la vía piramidal. La existencia de signos
irritativos del SNC, tales como rigidez de nuca,
Examen general vómitos, agita- ción psicomotora y convulsiones,
Debe ir dirigido básicamente a precisar: deben ser tenidos en cuenta en todos los pacientes
con TCE en el cuer- po de guardia, por cuanto
1. Alteraciones que aceleren la aparición de le- ayudan a conformar el diagnóstico y pueden
siones secundarias (hipoxia, isquemia y aumen- repercutir desfavorablemente en los resultados.
to de la presión intracraneal).
2. Presencia de lesiones asociadas: raquimedula- Cuadro clínico de las lesiones difusas
res, maxilofaciales, toracoabdominales y de los producidas por los TCE
miembros.
Traumatismo craneal simple
EXAMEN NEUROLÓGICO Se producen de muy diversas formas y son los más
EN EL CUERPO DE GUARDIA frecuentes. El paciente no tuvo turbación ni pérdida
de la conciencia, está orientado y su examen neuro-
1. Exploración de la conciencia (EGC). lógico es normal; suele presentar lesiones de las
2. Reflejos pupilares. par- tes blandas, con heridas o sin ella, y aquejar
3. Evaluación de los movimientos oculares: dolor en el sitio del traumatismo. Su tratamiento se
a. Reflejos óculo-céfalo-giros. limita a medidas sintomáticas y no requieren
b. Reflejos óculo-vestibulares. valoración neuroquirúrgica. Está contraindicado el
4. Examen de la motilidad. uso de se- dantes. Debe aconsejarse siempre
5. Examen grosero de la sensibilidad. observación en el domicilio y recurrir al médico
6. Examen de los reflejos. ante la aparición de cefalea de intensidad
7. Presencia de signos irritativos del SNC. progresiva, vómitos o cualquier signo neurológico.

La exploración de la conciencia se realiza inter- Conmoción cerebral


nacionalmente utilizando la EGC, que brinda una El concepto de conmoción cerebral y sus bases fi-
idea aproximada de la capacidad funcional de la siopatológicas sigue siendo controvertido, pues se
corteza cerebral. define como una alteración transitoria y reversible
La anisocoria en un paciente con alteraciones de de la conciencia, que en su forma más ligera se ma-
la conciencia es un signo precursor de compresión nifiesta por un estado de confusión y
cerebral unilateral y representa una emergencia neu- desorientación breve, sin amnesia ni inconsciencia;
roquirúrgica. La miosis (1 a 3 mm) bilateral aparece pero en su ex- presión típica se presenta con una
tempranamente en las hernias encefálicas centrales. inconsciencia in- mediata al traumatismo,
Los movimientos conjugados son un índice impor- supresión de los reflejos e incluso apnea,
tante de la integridad funcional de la formación bradicardia e hipotensión fugaces.
reticular del tallo. Ellos se exploran en los enfermos Al recuperar el conocimiento, el enfermo presen-
inconscientes a través de los movimientos óculo-
ta cefalea, vómitos y amnesia retrógrada,
céfalo-giros.
anterógra- da, o ambas. La duración de la amnesia
El examen de la motilidad va dirigido fundamen-
es la mejor medida de la intensidad de la
talmente a evaluar la fuerza y la simetría de la res-
conmoción. La dura- ción de la inconsciencia ha
puesta para precisar un defecto motor. La exploración
sido definida de forma arbitraria; para muchos
grosera de la sensibilidad permite medir la respues-
ta del enfermo al dolor, pero además si existe o no autores no debe exceder de 1 h, otros la aceptan
un nivel sensitivo que ayude a buscar una lesión hasta las 6 h. Todos estos elementos deben
raquimedular. revertir y el paciente estará total- mente
El examen de algunos otros reflejos del tallo ce- recuperado antes de las 24 h. La conmoción
rebral, cutaneomucosos y osteotendinosos, y la apa- cerebral no puede tener signos focales, ni secuelas
y su sello distintivo es el carácter transitorio y
rever- sible; requiere observación médica por un
período
441
no inferior a 24 h y su tratamiento se basa en medidas Complicaciones de los TCE
sintomáticas y reposo. Su pronóstico es favorable.
I. Intracraneales.
Tempranas (1er. mes):
Contusión cerebral
a) Hipoxia cerebral.
Se trata de un cuadro postraumático de envergadu-
ra, con lesión anatómica demostrable capaz de pro- b) Isquemia cerebral.
ducir una alteración prolongada de la conciencia y c) Edema cerebral.
signos deficitarios o irritativos del SNC. La frecuen- d) Hematomas intracraneales.
cia de su diagnóstico ha aumentado con el adveni- e) HSA postraumática.
miento de la TAC; se localiza más en los lóbulos f) Alteraciones metabólicas.
frontales y temporales, dadas las características de g) Hidrocefalia externa.
la base del cráneo en esto si, y varía desde un foco h) Convulsiones.
pequeño de petequias y microhemorragias con ede- i) Neumoencéfalo postraumático.
ma local, hasta una extensa área de laceración y ne- j) Meningoencefalitis.
crosis; de manera habitual acompaña a los k) Sangramiento digestivo.
hematomas subdurales e intracerebrales, y a la he- l) Vasospasmo, isquemia o infarto cerebral.
morragia subaracnoidea (HSA). m) Sepsis respiratoria.
El cuadro clínico de la contusión es estable, a di-
ferencia del de la conmoción; en ocasiones el coma
Tardías:
se prolonga por días o semanas, habitualmente deja
a) Hematoma subdural crónico.
secuelas y su pronóstico es sombrío.
El tratamiento de la contusión cerebral es compe- b) Hidrocefalia interna.
tencia del intensivista y el neurocirujano. c) Síndrome vestibular postraumático.
d) Síndrome poscontusional.
Compresión cerebral e) DCP postraumatismo.
Es el cuadro clínico resultante de la pérdida de la f) Osteomielitis.
correlación entre la capacidad del cráneo y su con- g) Psicosis postraumática.
tenido, más allá de las posibilidades amortiguadoras h) Fístula de LCR.
de sus elementos materiales: encéfalo, sangre y LCR,
que se manifiesta como un SHI postraumático. Sus II. Extracraneales.
causas más frecuentes son: edema cerebral, aumen- 1. Distress respiratorio.
to del volumen sanguíneo cerebral, hematomas in- 2. Tromboembolismo pulmonar.
tracraneales, hidrocefalia postraumática y el 3. Tromboembolismo grasoso.
neumoencéfalo a tensión. 4. Sepsis respiratoria.
Se caracteriza clínicamente por cefalea que va en 5. Sepsis urogenital.
aumento, vómitos, deterioro progresivo de la con-
6. Escara de decúbito.
ciencia, signos deficitarios cada vez más intensos y
7. Desnutrición.
bradicardia, HTA y alteraciones del ritmo respi-
ratorio. 8. Sangramiento digestivo alto.
La compresión cerebral puede ser central o unila- Conducta que se debe seguir frente
teral; en esta última aparece con mayor frecuencia la a un paciente con TCE en el cuerpo
anisocoria y los defectos motores de un hemicuerpo. de guardia
Contusión cerebelosa El médico de guardia debe ser capaz de diferenciar 2
Es más común en pacientes con traumatismos occi- grandes categorías:
pitales. Se caracteriza por manifestaciones cerebe-
losas uni o bilaterales: las más relevantes son la ataxia 1. Paciente con traumatismo craneal simple o
y la hipotonía, acompañadas de cefalea subocci- con conmoción cerebral ligera. Ninguno de
pital. los dos necesita atención especializada.
442
2. Paciente con TCE con sospecha de fractura o La incidencia de los TRM severos (paraplejía y
alguno de los cuadros clínicos ya descritos, que cuadriplejía) es de 10 a 50 casos por millón de
requiere tratamiento especializado. habi- tantes por año. Su morbilidad es incluso
superior a la del TCE.
Frente a los enfermos con TCE y alteraciones de La región cervical baja (C4 a C7) y la unión
la conciencia, antes de remitirlos, debe cumplirse lo dorsolumbar (D11 y L1) son los sitios más frecuen-
siguiente: temente afectados, con un franco predominio en los
pacientes mayores de 30 años. Los accidentes auto-
1. Inmovilización de la columna. movilísticos, de motocicletas, bicicletas, los lanza-
2. Garantizar la función respiratoria para preve- mientos en aguas de bajo fondo y los traumatismos
nir la hipoxia. en algunos deportes son sus causas más comunes.
3. Garantizar la estabilidad hemodinámica para: De forma aproximada un 50% de los enfermos
• Prevenir la isquemia. con paraplejía o cuadriplejía, tienen al momento de
• Yugular las hemorragias. su ingreso otras lesiones asociadas del cráneo, tórax,
• Reponer volumen. abdomen, pelvis ósea o algunas de las extremida-
4. Prevenir el aumento de la presión intracraneal des, lo cual es necesario evaluar y tratar adecuada-
con: mente, pues estas asociaciones ensombrecen el
• Manitol, 1 a 2g / kg peso EV. pronóstico.
• Furosemida + 0,3 mg / kg peso EV. La mortalidad en los TRM depende del nivel y la
5. Asegurar el equilibrio hidroelectrolítico. severidad de la lesión, la existencia de lesiones aso-
ciadas, la edad y la presencia de otras
Lo que no se debe hacer ante un paciente con un enfermedades previas al traumatismo. En sentido
TCE: general, mien- tras más alto es el nivel de la
1. La punción lumbar está contraindicada. lesión, mayor es la morbimortalidad. Las
2. No se deben utilizar sedantes. principales causas de muerte temprana en estos
3. No emplear soluciones con dextrosa en el pe- pacientes son el embolismo pulmo- nar, insuficiencia
ríodo de ventana terapéutica. respiratoria, paro cardiorrespirato- rio por edema
4. No se debe remitir un paciente con alteracio- medular ascendente y su combinación con TCE
severos o lesiones múltiples en otros luga- res de la
nes cardiorrespiratorias.
economía.
Al ocurrir el accidente se producen las llamadas
El uso de los esteroides en el tratamiento del TCE
lesiones primarias: fracturas, luxaciones y lesiones
ha perdido progresivamente sus defensores. Su uti-
ligamentosas, que pueden acompañarse de un daño
lidad en estos momentos es incierta. variable en intensidad sobre la médula y sus raíces,
Los anticonvulsivantes con fines profilácticos son pero si no se actúa adecuada y rápidamente, y ade-
cada vez menos defendidos en el momento actual; más concomitan lesiones en otro sitio, entonces se
la mayoría de los autores los emplean en las lesio- acelera la aparición de las secundarias: hipoxia, is-
nes abiertas con exposición o salida de masa ence- quemia, infarto y edema, que agravan de forma sig-
fálica, o si el enfermo tuvo convulsiones. nificativa el pronóstico. Estas lesiones se desarrollan
en la médula sobre todo en las primeras 3 h; de ahí
la importancia de actuar con rapidez.
TRAUMATISMOS
Concepto
RAQUIMEDULARES Traumatismos raquimedulares son las alteraciones
que sufren las vértebras, sus ligamentos, la médula,
El examen inicial en el TRM está dirigido a la de- las raíces y sus cubiertas meníngeas por la acción
tección del sitio probable de lesiones vertebrales, de un agente vulnerante.
ligamentosas y del daño neurológico, para con ello
lograr una inmovilización efectiva y prevenir las Lesiones en los TRM
complicaciones. 1. Columna vertebral. Son más frecuentes en la
columna cervical baja y la unión dorsolumbar, e
443
incluyen una extensa variedad de lesiones: fractu- • Examinar los reflejos osteotendinosos y
ras y luxaciones del cuerpo vertebral, pedículos, lá- cuta- neomucosos.
minas y apófisis espinosas, así como también • Determinar la presencia de priapismo y de
disrupción de ligamentos y prolapso del disco inter- sig- no de Babinski.
vertebral. Entre las causas más importantes de estas 3. Es necesario insistir en lo siguiente:
alteraciones se encuentran la hiperflexión, hiperex- a) Frente a todo paciente inconsciente, hay
tensión, la combinación de ambos mecanismos, co- que tener en mente la posibilidad de una
nocida como whiplash (latigazo); la compresión axial lesión cervical, y, por tanto, el primer paso
sobre el cuerpo vertebral y otros mecanismos de ro- es in- movilizar la columna cervical.
tación o lateralización extrema por lesiones de la b) El garantizar una buena ventilación y esta-
unión craneocervical, que con gran frecuencia pro- bilidad hemodinámica previene o retarda
vocan la muerte inmediata. las lesiones secundarias.
2. Meninges. El daño de las envolturas meníngeas c) La presencia de respiración diafragmática en
del raquis suele dar lugar a colecciones de sangre un politraumatizado fláccido es signo de le-
epidurales, subdurales, o retención de LCR por le- sión de la columna cervical baja.
sión de la aracnoides, de forma parecida a lo que d) El priapismo y el signo de Babinski se pro-
sucede en el compartimiento intracraneal. Se consi- ducen en el TRM por liberación medular, y
dera un TRM penetrante cuando hay continuidad por ello expresan una lesión grave y de mal
entre la laceración de las partes blandas y la rotura pronóstico.
de la duramadre, lo cual es indicación de tratamien-
to quirúrgico de urgencia. Cuadro clínico de los TRM
3. Médula y raíces. El trastorno neurológico de Traumatismo raquídeo simple
los TRM es expresión del daño de la médula espi- Paciente que después de un traumatismo aqueja do-
nal, la cola de caballo o de cualquiera de sus raíces; lor en el sitio del impacto, que quizás presente con-
puede ser transitorio y reversible como resultado del tractura muscular paravertebral antálgica, pero no
“shock espinal”, o permanente, como expresión de tiene manifestaciones de déficit motor ni de altera-
daño estructural, ya sea por las lesiones primarias: ción de los esfínteres, y en el examen con los Rx no
estiramiento, compresión por un fragmento óseo, se aprecian lesiones óseas. Estos enfermos no re-
prolapso discal, hemorragias, o secundarias a la hi- quieren atención especializada y su tratamiento se
poxia: isquemia, edema, trastornos de la microcircu- limita a medidas analgésicas y observación domici-
lación, hematomielia, etc. liaria; el reposo depende de la intensidad del dolor
y de la labor que realiza.
Examen neurológico de los TRM en el
cuerpo de guardia Fractura vertebral sin compromiso neurológico
Clínicamente se presenta con un cuadro similar al
Este examen inicial contempla:
anterior, donde el dolor es severo, pero su examen
1. Anamnesis:
neurológico es normal. El diagnóstico se hace por
• Precisar el mecanismo del traumatismo.
los Rx y el manejo de estos enfermos es competen-
• Averiguar el tiempo transcurrido desde el mo-
cia del ortopédico.
mento del impacto.
• Inquirir sobre síntomas y signos precisando
Conmoción medular
su curso evolutivo (está igual, mejor o peor).
Es la alteración parcial o total de las funciones me-
2. Exploración física:
dulares, que aparece inmediatamente después del
• Determinar el estado de las funciones respi-
traumatismo acompañada de dolor, cuyos signos
ratorias y cardiovasculares.
comienzan a regresar de forma temprana y que des-
• Determinar el nivel sensitivo. aparecen de manera total antes de 24 h. Su
• Describir las características del defecto motor. mecanis- mo de producción más frecuente es la
• Precisar las alteraciones en el control de los combinación de hiperextensión seguida de
esfínteres. hiperflexión (whiplash) y no deja secuelas.
444
Por la importancia de las lesiones medulares, todo Síndrome cordonal posterior
enfermo con TRM con signos neurológicos debe Se caracteriza por la pérdida de la sensibilidad
recibir tratamiento precoz y el diagnóstico de con- propioceptiva por debajo del nivel de la lesión; re-
moción medular se hará retrospectivamente. sulta raro en la práctica y está asociado a traumatis-
mos por extensión forzada de la columna.
Contusión medular
Bajo este concepto se agrupa una variedad de cua- Síndrome de hemisección medular (Brown-
dros clínicos que dependen del nivel de la lesión, Séquard) Es el conjunto de fenómenos que se
caracterizados por signos deficitarios motores, sen- producen por la sección transversal de la mitad de
sitivos, alteraciones de los reflejos, trastornos en el la médula, ya sea por traumatismo u otro proceso
control de los esfínteres, etc., que no han desapare- patológico. En su forma pura no es realmente
cido en las primeras 24 h, que tienen un carácter frecuente y se caracteri- za por.
estacionario por un período de días, semanas o me-
ses y que dejan al final secuelas de mayor o menor 1. En el lado de la lesión:
envergadura. a. Parálisis motora ipsilateral. Ocurre por le-
Las lesiones de la columna cervical dan lugar a sión del haz piramidal, que ya se había
signos deficitarios de las cuatro extremidades; las decusado en la unión bulboprotuberancial;
de la columna dorsal, a paraparesias o paraplejías; de forma inicial es fláccida con abolición
las del extremo distal de la médula se sitúan a nivel de los reflejos osteotendinosos, y pasado el
de L1 y L2 y ocasionan un síndrome del cono pe- ríodo de shock espinal se torna
medular; y las lesiones por debajo de L2 producen espástica (hi- pertonía más
un síndrome de la “cola de caballo”. hiperreflexia), con reflejo plantar
El traumatismo puede comprometer alguno de los habitualmente en extensión.
cordones en particular, la mitad o la totalidad de la b. Parálisis vasomotora. Es el resultado de la
médula, en cuyo caso ocurren cuadros clínicos par- lesión de las vías vasoconstrictoras del cor-
ticulares llamados síndromes. Tales son: dón lateral homolateral. Al inicio la piel
está enrojecida y más caliente que en el lado
Síndrome cordonal anterior sano, para luego pasar a un estado de
Se produce por daño de la porción ventral de la mé- frialdad y acrocianosis con edemas
dula y se comprometen fundamentalmente la vía maleolares.
corticospinal motora y los haces espinotalámicos c. Pérdida de la sensibilidad propioceptiva
(temperatura y dolor), lo que da lugar a una paresia (vi- bración, presión, noción de posición).
o parálisis fláccida con pérdida parcial o total de la Es el resultado de la lesión del cordón
sensibilidad termoalgésica y preservación de la tác- posterior.
til específica y propioceptiva. De forma usual ocurre d. Hiperestesia táctil transitoria en el lado de
por hiperflexión de la columna, y en ocasiones se la parálisis. Tiene una fisiopatología más
asocia a un prolapso del disco intervertebral. oscura. De todas formas, el hecho de que la
sensibilidad táctil epicrítica viaja por el cor-
dón posterior ipsilateral y la táctil
Síndrome cordonal central
protopática lo hace en el haz
Se distingue por un defecto motor más importante
espinotalámico anterior contralateral,
en las extremidades superiores que en las inferiores;
explica que este tipo de sensi- bilidad sea el
la toma en los miembros superiores es a predominio
menos afectado.
distal y se acompaña de disfunción cervical y de un
grado variable de pérdida de la sensibilidad por de- 2. En el lado contrario de la lesión:
Pérdida de la sensibilidad superficial, funda-
bajo del nivel de la lesión. Se produce habitualmen-
mentalmente la dolorosa y la térmica, por le-
te por un mecanismo de hiperextensión y es más
sión del haz espinotalámico lateral. La
frecuente en adultos mayores de 50 años, con cam-
sensibilidad táctil es la menos dañada, pues
bios degenerativos de la columna cervical.
el haz espinotalámico ventral (sensibilidad
protopática) está afectado, pero la sensibili-
dad táctil específica (cordón posterior), trans-
curre, a diferencia de las anteriores, por el
mismo lado, es decir, el no lesionado.
445
Síndrome de sección medular completa. Síndrome ción sudoral, reaparece el reflejo pilomotor. Los
de Bastian tras- tornos vasomotores y el trofismo mejoran.
En los TRM severos es frecuente la interrupción fi- General- mente transcurren de 2 a 5 meses para el
siológica o anatómica de todas las funciones medu- surgimiento de la segunda etapa.
lares, como resultado de la compresión por
fragmentos óseos, prolapso del disco intervertebral, Síndrome del epicono
sangramiento intramedular o isquemia. El cuadro Los traumatismos de la columna vertebral a nivel
clínico resultante evolucionará en dos etapas. de la unión toracolumbar dañan la médula lumbar
Etapa inicial. Se caracteriza por un shock espi- en sus últimos segmentos, como consecuencia de
nal, con defecto motor fláccido, anestesia total por la diferencia de longitud entre el raquis y ella.
debajo del sitio de la lesión y abolición de los refle- El epicono medular está formado por los segmentos
jos osteotendinosos y cutaneomucosos. El reflejo L5, S1 y S2; sus lesiones provocan anestesia del
cutaneoplantar habitualmente está ausente, pero a escro- to, pene y parte de los glúteos, y desde allí
veces existe una respuesta paradójica en flexión len- descien- de en forma de una banda metamérica
ta. Se producen alteraciones del control esfinteria- por la cara posterior de los muslos, posteroexterna
no: incontinencia fecal y retención urinaria. Los de las pier- nas y se extiende por todas las
trastornos tróficos son muy acentuados y ocasionan regiones plantares. Los reflejos rotuliano y
la aparición temprana de escaras por decúbito. Los cremasteriano no se afec- tan, en tanto el aquiliano
trastornos vasomotores y simpáticos dan lugar a la y el plantar estarán aboli- dos. La parálisis
pérdida del reflejo de piloerección y de la sudora- afectará fundamentalmente los músculos
ción en los segmentos afectados. peroneos y los del pie.
Cuando la sección ocurre en la columna cervical
alta (C1 a C4), provoca paro respiratorio al compro- Síndrome del cono medular
meter el origen de los nervios frénicos (C4). Si se Los traumatismos a nivel de la primera vértebra
produce en la columna cervical baja, la parálisis de lum- bar suelen dañar el cono terminal, formado
los nervios intercostales da lugar a una respiración por los segmentos medulares de S2 a S5. Las
diafragmática; en estos enfermos se observa a veces lesiones del cono provocan anestesia en el pene,
una hipotensión arterial severa o shock, con bradi- escroto, gran- des labios, vulva y parte posterior de
cardia por pérdida de los estímulos simpáticos al las nalgas, des- ciende por la cara interna de los
corazón. muslos en forma de triángulo con vértice próximo a
Etapa tardía o de liberación medular. Reapare- la cara interna de la rodilla y base hacia arriba;
cen los reflejos segmentarios e intersegmentarios por esta distribución es co- nocida como “anestesia en
debajo del sitio lesionado, lo que da lugar al llama- silla de montar”.
do “automatismo medular”: espasticidad (hiperto- Por otro lado, la ubicación de centros esfinteria-
nía más hiperreflexia) de los miembros afectados, nos importantes en esta región, da lugar a una in-
los reflejos cutaneomucosos por lo común reapare- continencia vesical y rectal con anestesia y
cen, aunque no todos; el cutáneo plantar se produce abolición de la erección y eyaculación; los reflejos
en extensión (signo de Babinski), se presentan re- plantar y anal están abolidos.
flejos de defensa o automatismo medular: reflejo de
triple flexión, reflejo en masa, clonus, etc. Síndrome de la cola de caballo
Tras la etapa de retención vesical y micción por Cuando los traumatismos afectan el raquis por de-
rebosamiento, tiene lugar el automatismo vesical: el bajo de L1 no dañan la médula, que ya terminó en
paciente orina sin percatarse, pues al aumentar la la cara posterior de dicha vértebra, pero sí a las
presión intravesical por la orina, se abren los raíces, a todas o a algunas procedentes de los
esfínteres vesicales. El esfínter rectal recupera de segmentos medulares desde L2 a S5, que aún no
manera parcial su tono y habitualmente el enfermo han abando- nado el raquis. Este conjunto es
está constipado y la evacuación se produce de for- conocido con el nombre de la “cola de caballo”, y
ma inconsciente. como se compren- de, las lesiones a este nivel
La anhidrosis persiste o da paso al sudor espinal. comprometen diferentes raíces uni o
Si se recupera la función de los centros de la secre- bilateralmente, y dan lugar a un cuadro muy
pleomórfico.
En su forma más típica se presenta como una pa-
rálisis fláccida, con amiotrofia precoz, hipotonía,
446
abolición de los reflejos rotuliano y aquiliano, in- personal especializado, dados los riesgos que
continencia o retención de los esfínteres vesical y impli- ca la movilización de estos enfermos.
rectal, abolición de la erección y anestesia de distri- Complicaciones de los TRM
bución radicular; además, dolores urentes (anestesia
dolorosa), que habitualmente respetan la sensibili- Tempranas
dad testicular. 1. Shock neurogénico. En las lesiones cervicales,
la interrupción brusca de la actividad simpáti-
Síndrome de contusión radicular ca da lugar a una vasodilatación periférica con
Se caracteriza por síntomas y signos de distribución hipotensión arterial y, a la vez, la pérdida del
metamérica en correspondencia con el segmento le- impulso simpático sobre el miocardio provoca
sionado y con mayor frecuencia se debe a lesión de bradicardia, la cual redunda en una hipoperfu-
los pedículos vertebrales. En él se encuentran sig- sión de la médula.
nos irritativos, como dolor y parestesias en el terri- 2. Edema medular ascendente.
torio de las raíces afectadas, y signos deficitarios, 3. Embolismo pulmonar.
como parálisis fláccida y arreflexia osteotendinosa, 4. Fallo cardiorrespiratorio.
alteraciones de grado variable de la sensibilidad en 5. Insuficiencia respiratoria.
el dermatoma correspondiente y atrofia muscular
precoz. Tardías
1. Sepsis respiratorias y urogenitales.
Compresión medular 2. Escaras de decúbito.
El diagnóstico de compresión medular es evolutivo. 3. Anquilosis de las articulaciones.
Se trata de un enfermo con un cuadro de contusión 4. Trombosis venosas en los miembros infe-
medular, en el que pasado un intervalo de tiempo riores.
los síntomas y signos comienzan a empeorar; el más 5. Mielopatía postraumática.
común de ellos es la elevación del nivel de aneste- 6. Quistes intramedulares.
sia, por edema medular, y el empeoramiento del de-
fecto motor. Una causa frecuente de esta situación Función del internista
es la movilización y transporte inadecuado de los ante un paciente con un TRM
enfermos con TRM; otras veces se produce por la en el cuerpo de guardia
aparición de las lesiones secundarias como conse-
1. Recordar que todo paciente inconsciente pue-
cuencia de no haber asegurado las funciones car-
de tener un TRM; por ello, la inmovilización
diorrespiratorias; el desarrollo de hematomas
de la columna cervical (si no se hizo en el
epidurales o subdurales provoca también un síndro-
sitio donde ocurrió el accidente) es el primer
me medular compresivo, pero en realidad son poco
paso, y la movilización del enfermo en el
comunes.
cuerpo de guardia debe ser muy cuidadosa.
Exámenes complementarios 2. Garantizar una ventilación pulmonar adecuada.
3. Lograr la estabilidad hemodinámica.
Radiografía simple. Tiene gran valor para el diag- 4. Realizar un buen examen neurológico para
nóstico de las lesiones óseas. tra- tar de precisar el nivel de la lesión.
RMN. Es hoy en día el medio diagnóstico por ex- 5. Administrar:
celencia para las lesiones intrarraquídeas. a) Manitol al 20 %. Algunos autores utilizan
TAC. Tiene una elevada posibilidad de precisar dosis de 1 a 2 g/kg de peso; otros propo-
las lesiones fundamentalmente óseas. nen 0,25 g/kg de peso.
Mielografía. Resulta muy útil, en ausencia de las b) Furosemida, 0,3 a 0,6 mg/kg/EV.
tecnologías de punta, para localizar el sitio de la le- c) Esteroides: no hay criterio unánime, pero la
sión. mayoría no les conceden valor. De utilizar-
PL con manometría y pruebas dinámicas. Aporta los, preferir metilprednisolona o, en su de-
elementos sobre el carácter del LCR y permite esta- fecto, dexametasona, 20 mg EV en el
blecer la presencia de bloqueos en su circulación, cuerpo de guardia.
pero en estos casos de TRM debe ser realizada por
447
43
MIELOPATÍA TRANSVERSA AGUDA
Y SUBAGUDA
La mayoría de las enfermedades agudas y subagudas Estudios recientes tienden a considerar también a
de la médula lesionan un segmento transversal de la mielitis transversa aguda (MTA) como una infec-
ésta. Esta mielopatía afecta uno o varios segmentos ción ligada a fenómenos inmunológicos, por el he-
medulares contiguos. cho de que el agente infeccioso no he podido ser
aislado en el sistema nervioso, lo que sugiere que
esta afección es el resultado de una respuesta auto-
MIELITIS inmune, donde la infección sería el “disparador”, y
no de una infección directa de la médula.
Por otra parte, algunos casos de esclerosis múlti-
Concepto ple se presentan inicialmente como una MTA, que
La mielitis se define como un proceso inflamatorio no está asociada con un antecedente de infección o
de la médula espinal, que usualmente afecta tanto a vacunación.
Está descrita la mielitis transversa asociada a
la sustancia blanca como a la gris y que por lo gene-
otras enfermedades en las que en su patogenia
ral tiene una extensión limitada. Cuando está loca-
existen mecanismos autoinmunes, tales como la
lizada a unos pocos segmentos se le llama mielitis
neuritis óp- tica de Devic (enfermedad
transversa y cuando asciende progresivamente, mie-
desmielinizante), el lupus eritematoso diseminado
litis ascendente. y otras enfermedades del colágeno.
También se ha observado mielitis transversa aso-
Etiología ciada al síndrome de Sjögren, la enfermedad de
Desde el punto de vista etiológico, la mielitis se ubica Behçet y a la sarcoidosis.
en dos grandes grupos: Autores como Harrison admiten que la invasión
directa de la médula es frecuentemente producida
1. Primaria o idiopática.
por agentes infecciosos, sobre todo virus.
2. Secundaria. La mielitis observada en ciertos casos de schisto-
a. Viral (herpes zóster, coxsackie, sarampión, somiasis se cita como ejemplo de mielitis parasita-
parotiditis, varicela, rabia). Otros virus: ria; se describe como una mielitis intensamente
Epstein-Barr virus, citomegalovirus, mico- inflamatoria y granulomatosa, debida a una
plasma y VIH virus. respues- ta local a las enzimas hísticas digestivas
b. Bacteriana piógena, por invasión medular producidas por los huevos del parásito.
directa o por propagación de un foco sépti- También ha sido descrita una mielitis en la toxo-
co cercano. plasmosis, aunque sólo en aquellos casos en que la
c. Tuberculosa toxoplasmosis es consecuencia del SIDA.
d. Como manifestación de una sífilis cerebro- Por lo general, resulta difícil establecer la causa
vascular de una mielitis.
e. Otras. Vascular: aneurisma disecante de la
aorta, oclusión de la arteria espinal anterior, Cuadro clínico
malformación arteriovenosa y hemorragia El comienzo es agudo y suele estar precedido du-
epidural por trastornos hemorrágicos. rante varios días por fiebre a veces elevada, debili-

448
dad muscular, casi siempre en los miembros inferio- La mielografía ayudará a hacer el diagnóstico de
res, y dolor abdominal ligero en forma de cinturón, este último proceso, y sólo se indicará cuando el de
cuando la localización de la lesión es dorsolumbar. mielitis ofrezca dudas con las restantes causas de
A estos síntomas sigue una parálisis de intensidad paraplejía fláccida central y en caso de que la RMN
variable por debajo de la lesión, generalmente una no sea factible de realizarse.
paraplejía con todos los atributos de la parálisis
fláccida medular: Evolución y pronóstico
1. Disminución o abolición de los reflejos osteo- La evolución de esta enfermedad es habitualmente
tendinosos y cutáneos. desfavorable, aunque varía de acuerdo con la
2. Pérdida de la sensibilidad con nivel de aneste- locali- zación y el grado de extensión e intensidad
sia, cuyo límite superior se corresponde con el del seg- mento medular afectado. Así, las mielitis
segmento lesionado. en la zona cervical con frecuencia se extienden
3. Trastornos esfinterianos. al bulbo raquídeo, por lo cual comportan muy mal
4. Dolor espontáneo a la percusión en el nivel ver- pronósti- co; son las que mayores trastornos
tebral del lugar de la afectación. intestinales y uri- narios producen. La sepsis
Diagnóstico respiratoria, las úlceras de decúbito y las
infecciones urinarias ensombre- cen más aún la
Diagnóstico positivo
El diagnóstico positivo se basa en las manifestacio- evolución del enfermo. Tratamiento
nes clínicas. Cuando se conoce la causa de la mielitis, debe ha-
El LCR puede ser normal, lo que no excluye el cerse tratamiento oportuno, aunque generalmente los
diagnóstico. El hallazgo más característico del LCR resultados son pobres.
en la MTA es un aumento de las células y las proteí- La sospecha o la certidumbre de una infección
nas, con una maniobra de Queckenstedt normal. bacteriana posibilita el uso racional de antibióticos.
Cuando la electroforesis del LCR muestra una ban- Si hay evidencias de un origen tuberculoso, se
da clonal, este hallazgo es índice de una futura evo- indica tratamiento antibacilar, al cual pueden aso-
lución hacia la esclerosis en placas. ciarse los corticosteroides. Éstos también se reco-
Actualmente, la RMN tiene gran utilidad, pues miendan en los cuadros virales y en aquellos en los
permite observar la inflamación de la médula y áreas que la causa no ha podido ser demostrada, siempre
difusas multifocales, y también en algunos casos el que no existan contraindicaciones formales para su
uso de contraste deja ver disrupción de la barrera uso. Los resultados son poco alentadores.
hematoencefálica asociada a inflamación perivenosa. En la actualidad se recomienda el tratamiento
La RMN también permite precisar si la MTA re-
con metilprednisolona EV, seguido por prednisona
presenta un ataque inicial de una esclerosis múlti-
oral. Ocupa lugar destacado en la terapéutica del
ple.
en- fermo con mielitis el tratamiento de los
La TAC no tiene mayor sensibilidad y especifici-
trastornos vesicales y rectales. Debe llevarse un
dad diagnóstica que la RMN.
control de la defecación y la micción, de manera
que se reconoz- ca a tiempo cualquier trastorno de
Diagnóstico diferencial
El diagnóstico diferencial se hará con todas aque- estas funciones. Es casi obligada la cateterización
llas afecciones productoras de una paraplejía fláccida vesical y los lava-
con las características descritas. dos con soluciones desinfectantes.
En ocasiones resulta bastante difícil establecerlo También tiene importancia la prevención de úl-
con el absceso espinal epidural, que cursa también ceras de decúbito y de las infecciones respiratorias
con lesiones medulares transversas de evolución rá- hipostáticas, ya que son complicaciones que llevan
pida, dolor espinal y fiebre. al paciente a la muerte.
449
44
TABES DORSAL
La sífilis, enfermedad producida por Treponema glio raquídeo y desde allí la degeneración se extien-
pallidum, ocasiona una serie de alteraciones orgá- de a los cordones posteriores. No existe explicación
nicas en su etapa tardía (período terciario), entre las de por qué las raíces anteriores quedan protegidas.
cuales se destacan las de los sistemas cardiovascu- Se han descrito casos de afectación cordonal sin
lar y nervioso. En este último, la enfermedad sifilí- participación radicular, lo que ha servido para plan-
tica afecta las meninges y las arterias (meningitis y tear la posibilidad patogénica de una afectación pri-
sífilis meningovascular, respectivamente) y el maria del cordón posterior con toma radicular
paréquina nervioso. Entre estas últimas, ocupan lu- secundaria. Hoy se acepta la lesión inicial de la neu-
gar preponderante por las severas lesiones que oca- rona sensitiva con afectación secundaria de la raíz y
sionan, la parálisis general progresiva y la tabes del cordón posterior.
dorsal.
Anatomía patológica
Concepto Las meninges estan engrosadas en su porción
Se denomina tabes dorsal al cuadro clínico resul- poste- rior. La médula se observa estrechada y las
tante de la afectación de las raíces, los ganglios y raíces y los cordones posteriores presentan un color
los cordones posteriores de la médula espinal por la gris.
espiroqueta de la sífilis. Es una manifestación tar- La tinción con el método de la mielina muestra
día de la enfermedad. una desmielinización selectiva de los haces de Goll
y Burdach, y casi ninguna reacción inflamatoria;
Etiopatogenia con frecuencia sólo se afectan segmentos de estos
Los síntomas comienzan entre 5 y 30 años después haces
de la aparición del chancro, aunque en la mayoría (médula lumbar, sacra y cervical). Puede
de los casos se inician entre 10 y 20 años más tarde. observarse gliosis reacional. En la gran mayoría
Raras veces la tabes se presenta como manifesta- de los casos, estas alteraciones histopatológicas se
ción de una lúes congénita. Es más común en el ven en los seg- mentos lumbares.
hombre que en la mujer y afecta de forma mayori- Los nervios ópticos muestran con frecuencia una
taria a las personas entre 30 y 55 años. Era una ma- inflamación intersticial con obliteración vascular y
marcada desmielinización. Hay atrofia óptica en
nifestación relativamente frecuente de neurosífilis
el 10 % de los casos. Así mismo se encuentran
antes de la era antibiótica, hoy es poco vista en la
afec- tadas las fibras que conducen los impulsos de
clínica y la mayoría de los casos se ven asociados al
la pu- pila desde el cuerpo geniculado externo
SIDA.
hasta el núcleo de Eddinger-Westphal del III par
Resulta excepcional que la espiroqueta de la sífilis (Schaltem- brand). Además, se supone que estén
se observe en la médula del tabético, por lo cual se ha lesionados los haces simpáticos dilatadores de la
pensado que las manifestaciones de esta enferme- pupila situados muy cerca de las fibras anteriores.
dad sean sobre todo de orden tóxico-degenerativo. Noguchi logró descubrir la presencia de la espi-
Se plantea que la penetración del proceso sifilítico roqueta en el cordón posterior de la médula. Otros
se hace a través del receso del espacio del LCR, que autores la han hallado en las meninges.
acompaña a las raíces posteriores casi hasta el gan- En los enfermos tabéticos suele verse una aortitis
sifilítica, con aneurisma del cayado e insuficiencia
aórtica.

450
Cuadro clínico tudes segmentarias, vibración del diapasón, recono-
Generalmente comienza con dolores constrictivos en cimiento de cifras y letras dibujadas sobre la piel).
Existe una evidente dificultad en la percepción del
“cinturón” a nivel del tronco y dolores fulgurantes,
dolor profundo y en ocasiones hay un retraso de
terebrantes o desgarrantes en las extremidades infe-
3 a 5 segundos en la percepción del estímulo
riores, de pocos segundos de duración, pero que ani-
doloro- so. Este retraso es muy evidente en la
quilan al enfermo por su intensidad. Estos dolores
región hipotenar y en el territorio del trigémino. La
no son patognomónicos de la tabes, ya que pueden
ausen- cia de dolor a la compresión de los testículos
observarse también en las polineuritis (alcohólica, consti- tuye el signo de Pitres, y al pellizcamiento
diabética, infecciosa). del tendón de Aquiles, el signo de Abadie. En
En ocasiones se presentan crisis de dolor epigás- cambio, hay zo- nas en el tronco, por lo general
trico intensísimo, con vómitos incoercibles y a ve- segmentarias, con hipersensibilidad dolorosa, de tal
ces hematemesis: son las crisis gástricas de la tabes, manera, que el con- tacto con un cuerpo frío o
que tienen lugar de forma inopinada, en plena salud metálico provoca dolor. En el curso de la tabes
aparente; duran horas y días y desaparecen tan re- aparecen trastornos tróficos, de los cuales los más
pentinamente como surgieron, para luego reapare- importantes son la artropatía tabética y el mal
cer en la misma forma. El enfermo cree andar sobre perforante plantar. La primera se presenta con gran
un piso de algodón, lo que hace su marcha insegura, frecuencia en la columna lumbar, las rodillas y las
sobre todo en horas de la noche. Le resulta difícil caderas, y más raramente en otras articulaciones.
subir y bajar escaleras y con frecuencia refiere pares- Consiste en deformidades articula- res, en
tesias, pinchazos, calambres, etc., en diversas par-ocasiones grotescas y monstruosas, por frac- turas
tes del cuerpo. Por lo común aqueja disminución insensibles yuxtarticulares y neoformación de
progresiva de la visión, que a veces llega hasta lahueso en forma exuberante e irregular, subluxacio-
ceguera completa. nes, osteofitos gigantes, etc., indoloras en la inmen-
Su psiquismo es casi siempre normal; sin embar- sa mayoría de los casos y a menudo acompañadas
go, en algunos casos hay manifestaciones demen- de derrame sinovial. Evoluciona de manera tórpida.
ciales similares a las observadas en la parálisis La anquilosis es excepcional.
general progresiva; esta asociación constituye la El mal perforante plantar es en una cornificación
taboparálisis. de la piel en la zona de mayor presión de la planta
Constantemente existen trastornos del vaciamien- del pie, donde se labra un profundo cráter por el
que se expulsan tendones, músculos, huesos, etc. Al
to vesical, por pérdida de la sensación de repleción
de la vejiga (micción gota a gota, orina por rebosa-igual que la artropatía, no es patognomónico de la
miento, vejiga automática, etc.). La impotencia tabes. La exploración de los pares craneales
sexual es precoz y en ocasiones aparecen crisis de permite descubrir en un elevado porcentaje de
pacientes, el signo de Argyll- Robertson, que en los
priapismo. Puede presentarse espasmo de la glotis.
La marcha es característica, con aumento de la casos típicos consiste en miosis, abolición del
base de sustentación, la mirada fija en el suelo o en reflejo fotomotor y conservación del reflejo
los objetos cercanos, apoyado con las manos en las acomodador. El dolor pro- voca normalmente
paredes o con bastones, avanzando una pierna hacia dilatación de la pupila, reflejo que se conserva en
adelante de modo impetuoso para dejarla caer pesa- caso de esta alteración pupilar. En ocasiones hay
damente en un punto no previsto. El signo de desigualdad de la pupila y un contor- no pupilar
Romberg es positivo. Las pruebas talón-rodilla, ín- irregular. El signo de Argyll- Robertson es de
manera frecuente bilateral y cuando aparece en un
dice-nariz e índice-índice, originan errores manifies-
tos de medida cuando el enfermo los realiza con los solo ojo, está abolido también el reflejo con-
ojos cerrados. Existe gran hipotonía muscular con sensual. En el examen del fondo de ojo se aprecia
una atrofia papilar posneurítica.
hiperextensibilidad de las articulaciones y arreflexia
osteotendinosa; esta última a nivel de la rodilla cons-
Es común la parálisis de las cuerdas vocales.
tituye el signo de Westphal.
La sensibilidad está marcadamente alterada, en Exámenes complementarios
particular la profunda (reconocimiento de las acti- Serología. La prueba de laboratorio más utilizada
para detectar el anticuerpo reagínico (no
específico)
451
que contiene IgG e IgM es el VDRL(Venereal Di- 3. Período paralítico o estado de postración ma-
sease Research Laboratory), que puede ser negati- rasmática, en el que el enfermo sufre atroces
vo en la tabes dorsal. Otra prueba utilizada es el RPR dolores y es presa de infecciones cutáneas,
(Rapid Plasma Reagin), con la que se obtienen re- res- piratorias y urinarias, que lo conducen
sultados más rápidos. a la muerte.
Para encontrar el anticuerpo antitreponema (es-
pecífico) se usa el FTA-ABS (Fluorescent Trepone- Tratamiento
mal Antibody) que utiliza antígenos derivados del Cuando el caso se descubre al inicio de los sínto-
treponema. En la tabes el FTA-ABS es positivo en mas, el tratamiento reporta beneficios. El cuadro
la sangre casi siempre, pero su utilidad en el LCR clí- nico puede mejorar, pero sólo en muy raros
no está aclarada. Otros exámenes específicos del tre- casos se consigue la curación completa. Consiste
ponema son la MHA-TP (Microhemagglutination en la admi- nistración de:
Assay for Antibodies to T. pallidum) y la HATTS
(Hemagglutination-Treponemal Test por Syphilis). 1. Penicilina cristalina, 12 000 000 a 24 000 000 UI
Líquido cefalorraquídeo. La participación menín- diarias EV durante 10 a 21 días, o
gea en el proceso se evidencia por el aumento de 2. Penicilina procaína, 600 000 a 1 000 000 UI
las cifras de proteínas y leucocitos en el LCR, estos diarias IM durante 12 a 24 días, o
últi- 3. PAM, 2 o 3 inyecciones semanales IM hasta
mos con predominio de linfocitos. poner 12 000 000 o 24 000 000 UI, o
4. Penicilina benzatínica, 2 400 000 UI de entra-
Diagnóstico da y 1 200 000 UI cada 2 o 3 días IM hasta
El diagnóstico resulta fácil ante el cuadro completo poner 6 000 000 o 12 000 000 UI.
de la enfermedad, con las reacciones serológicas
positivas. Se dificulta cuando aparecen formas oli- En caso de alergia a la penicilina, se debe desen-
gosintomáticas, con serología dudosa o negativa, en sibilizar al enfermo y entonces tratarlo, pues no se
cuyo caso debe buscarse con mucha minuciosidad ha encontrado otro antibiótico realmente efectivo
algún grado de ataxia, trastornos de la sensibilidad para la neurosífilis. No obstante, en estos casos de
profunda, el signo de Westphal y, sobre todo, el sig- alergia se ha recomendado el uso de doxyciclina,
no de Argyll-Robertson. 200 mg por vía oral 2 veces al día durante 21 días
Hay que diferenciar la afección de múltiples pro- y si no hay historia de anafilaxia a la penicilina,
cesos patológicos capaces de simular un cuadro ceftriaxo- ne, 1g EV 1 vez al día por 14 días. No
tabético poco evidente: úlcera péptica, cólico sa- hay suficiente experiencia acumulada con estos
turnino, mielosis funicular, polineuropatía diabéti- procederes.
ca, porfiria aguda intermitente, enfermedad de A los 3 meses de concluido el tratamiento, deben
Friedreich, etc. El examen atento de estos casos con analizarse el LCR y la sangre. Si persisten las reac-
estudio radiológico contrastado gastrointestinal, es- ciones serológicas positivas y, sobre todo, si hubie-
tudio hematológico y los antecedentes personales y ra signos de actividad meníngea, se debe repetir el
familiares, conducirán al diagnóstico. curso con penicilina.
El LCR debe analizarse cada 3 meses durante el
Evolución primer año y cada 6 meses el segundo y el tercer
años.
La tabes es una enfermedad de curso crónico, que
Las crisis dolorosas en ocasiones ceden con ra-
evoluciona con períodos de empeoramiento relacio-
dioterapia de la médula lumbar, pero a veces hay
nados con exposición al frío, esfuerzos corporales,
que recurrir a la cordotomía. No debe usarse morfi-
infecciones, etc. Esquemáticamente se observan 3
na por el peligro que se corre de habituarse a ella.
períodos evolutivos.
Los dolores de las extremidades inferiores y en
1. Período preatáxico, en el que ocurren crisis do-
general las radiculoneuropatías, responden a la di-
lorosas, trastornos sensitivos, etc.
fenilhidantoína y a la carbamazepina. La atropina
2. Período atáxico, donde se desarrollan trastor-
da buenos resultados en la crisis gastrointestinales.
nos de la marcha y la coordinación, parálisis
Se debe reeducar al enfermo en relación con la
oculares, atrofia óptica, artropatías, trastornos
mar-
tróficos, etc.
cha y la ataxia.
452
45
SIRINGOMIELIA
El desarrollo imperfecto del tubo neural embriona- Etiopatogenia
rio por una falta de cierre del rafe dorsal, fue defini-
El 50 % de los casos corresponde a anomalías con-
do por Bremer como un estado constitucional
génitas del desarrollo y se asocia a malformación de
hereditario al cual denominó estado disráfico.
La cavitación tubular en el interior de la médula Arnold-Chiari, platibasia, atresia del agujero de
espinal fue descrita por primera vez por Estienne, Magendie, quiste de Dandy-Walker, meningocele y
en 1546, en su obra: La disection du corps humain; mielomeningocele, etc. El otro 50 % concomita con
en 1804, Portal reconoció los elementos clínicos tumores intramedulares, traumatismos, aracnoiditis
asociados a estas lesiones; pero fue Ollivier crónica tuberculosa y otros estados inflamatorios.
D’Angers, en 1824, quien la denominó siringomie- La siringomielia es una enfermedad de presenta-
lia (describió con este nombre la dilatación patoló- ción casi excepcional (84 x 100 000 habitantes en
gica del canal ependimario medular, en continuidad una publicación en Inglaterra) y para la mayoría de
con el IV ventrículo). los autores es más frecuente en hombres que en mu-
En 1882, Schultze precisó la correlación clinico- jeres. Se han descrito varios miembros de una fami-
patológica entre los quistes medulares y el cuadro lia afectados por la enfermedad, y a veces se
clínico. Por último, Gowers, en 1886, describió com- observa labio leporino, epispadias, pezones
pletamente el cuadro clínico de la sirigomielia. supernumera- rios, etc., en familiares de pacientes.
Concepto Los síntomas se inician alrededor de la 3ra. o 4ta.
La siringomielia puede definirse como una cavita- década de la vida y resulta raro su debut en niños o
ción tubular de la médula espinal que se extiende en adultos mayores. Habitualmente es una enferme-
por uno o varios segmentos. Dicho así, el término dad de curso lento.
no especifica la localización del quiste en relación Mucho se ha discutido sobre la etiopatogenia de
con el conducto ependimario, ni la histología de sus esta enfermedad durante el siglo XIX y primera mi-
paredes, ni las características del líquido en su inte- tad del XX. Carmeil la consideró un estado disráfico
rior, ni tampoco lo concerniente a su patogénesis. dentro del concepto dado por Bremer. En 1950,
Al tratar de diferenciar estas cavidades en relación Gardner planteó la teoría hidrodinámica de la sirin-
con todos esos elementos, han surgido términos más gomielia, la cual ha tenido una aceptación bastante
específicos, pero que a menudo aparecen en dife- generalizada hasta nuetros días. En síntesis,
rentes textos de forma intercambiable y la mayoría Gardner consideró que la anomalía inicial
de las veces son muy difíciles de diferenciar desde responsable de la siringomielia, de la malformación
el punto de vista clínico. de Arnold-Chiari, del Dandy-Walker y de los
Los estudios de RMN y TAC han permitido pre- quistes asociados del ce- rebelo, era la atresia en
cisar que el cuadro clínico habitual de la siringo- fase embrionaria del IV ven- trículo por
mielia es más frecuentemente provocado por una imperforación de los agujeros de Luschka y de
hidromielia, es decir, un quiste que representa una Magendie, lo cual impedía la normal salida del
dilatación del conducto ependimario que contiene LCR al espacio subaracnoideo y como consecuen-
LCR en su interior y cuya comunicación con el IV cia, la presión del pulso ventricular iba toda dirigida
ventrículo es poco común. hacia abajo, a través del conducto ependimario, y
provocaba así la hidromielia.

453
En épocas más recientes, algunos autores han de éstas. Algunos pacientes refieren diferencias en
presentado objeciones a esta teoría y han surgido la intensidad de la secreción sudoral entre un seg-
otras nuevas. Así, recientemente en 1996, se ha plan- mento corporal y su homólogo simétrico. Notan
teado la posibilidad de que la cavidad siringomiélica que les resulta difícil percibir las sensaciones de
sea el resultado de un conflicto isquémico medular dolor o de calor en algunas porciones de su
como consecuencia de las fuerzas de constricción y cuerpo, lo que motiva quemaduras, heridas, etc.,
compresión por una anomalía en la normal asincronía que demoran en cicatrizar. A veces aquejan algias
del crecimiento neuroeje-neurorraquis. segmentarias, de- formaciones articulares (de
Los defensores de esta nueva teoría proponen miembros superiores), fracturas espontáneas, etc.
como inicio del tratamiento quirúrgico, la liberación Excepcionalmente refie- ren dificultad para la
del filum terminale realizando una trepanación en el marcha por disminución de la fuerza en las
sacro y haciendo sección intra y extradural del filum. extremidades inferiores y seudoincon- tinencia
Anatomía patológica urinaria por vejiga neurogénica.
Las alteraciones objetivas, como atrofia de las
Aspecto macroscópico eminencias tenar e hipotenar que llega a la “mano
La médula aparece como un tubo de paredes delga- en garra”, deben buscarse en las extremidades
das. Cuando se abre, se observa una serie de cavida-
supe- riores porque la afección comienza en la
des comunicantes o no entre sí, llenas de un líquido
médula cervical.
amarillento, que afectan la comisura gris periepen-
Cuando el proceso siringomiélico se extiende al
dimaria, en ocasiones las astas medulares, tanto las
cordón lateral de la médula, aparecen signos de pi-
anteriores como las laterales y posteriores, e incluso
la sustancia blanca. ramidalismo. La sensibilidad se halla profundamente
Las cavidades siempre comienzan a nivel de la perturbada por afectación de las vías de la sensibili-
médula cervical y se extienden a veces hasta la pro- dad dolorosa y térmica a nivel de la comisura
tuberancia, y en ocasiones llegan al engrosamiento medular; por lo tanto, hay termoanalgesia con con-
lumbar. En el 30 % de los casos se encuentra un servación del tacto y de todos los tipos de sensibili-
tumor medular (glioma, hemangioblastoma). dad profunda. A esto se le llama disociación
Cuando la siringomielia se asocia a la malforma- siringomiélica de la sensibilidad. Sin embargo, la
ción de Arnold-Chiari, se observa uno de los dos extensión del proceso cavitario intramedular puede
tipos: en el tipo I existe comunicación entre el espa- lesionar el trayecto de las otras vías sensitivas, lo
cio subaracnoideo y la cavidad siringomiélica, y el que complicaría algo el esquema inicial.
líquido cavitario es muy semejante al cefalorraquí- En la cara se encuentra con frecuencia un síndro-
deo. En el tipo II no hay comunicación entre el es- me de Claude Bernard-Horner por lesión de la co-
pacio subaracnoideo y la cavidad, y el líquido lumna intermediolateral de la médula a nivel de C8
cavitario es muy rico en proteínas. y D1. Por la misma razón, en otros sitios se obser-
van diferencias del desarrollo piloso, trastornos
Aspecto microscópico tróficos, úlceras tórpidas, trastornos de la
Es posible encontrar dos tipos de lesiones: gliosis y pigmenta- ción de la piel, deformaciones
destrucción de la glía con formación consecutiva de ungueales, artropa- tías monstruosas, etc.
las cavidades. Se observan cavidades al lado de teji- La localización del proceso en el bulbo y la pro-
do glial, otras veces una columna ininterrumpida de tuberancia se llama siringobulbia y provoca trastor-
glía o una cavidad amplia y continua extendida des- nos sensitivos en el territorio del trigémino. Si se
de el IV ventrículo. lesiona el núcleo del hipogloso, habrá atrofia de los
músculos de la lengua (hemilengua); si el dañado
Cuadro clínico es el núcleo del facial, ocurre una atrofia de los
Los enfermos aquejan diversos síntomas, según la múscu- los faciales y se produce una parálisis facial
localización de las cavidades en altura y sentido perifé- rica. Casi siempre hay nistagmo, signo que
transversal. La mayor parte de las veces notan pér- ante un cuadro siringomiélico, nos confirma la
dida de las fuerzas en las manos y adelgazamiento participación bulbar.
Las características fisicoquímicas del LCR son
normales, excepto en caso de agrandamiento de la
454
médula, en que se produce un bloqueo subaracnoi- Otros procesos. En ocasiones, el cuadro clínico
deo con disociación albumino-citológica y a veces de la siringomielia, completo o incompleto, se ob-
síndrome de Froin. serva en el curso de mielopatías traumáticas
tardías, mielopatías por radiación, paquimeningitis
Diagnóstico cervical, espondiloartrosis cervical, mielitis
Diagnóstico positivo necrotizante, tu- mores del agujero occipital y
Se hará por la historia de trastornos motores, sensi- tumores extramedula- res del canal cervical alto,
tivos o ambos, la comprobación de la característica por lo cual también habrá que establecer el
disociación de la sensibilidad, las atrofias muscula- diagnóstico diferencial con estas afecciones. La
res y la cifoscoliosis, con LCR normal y la observa- RMN y la TAC con la técnica descri- ta resolverán
ción de alguna de las alteraciones del estado disráfico las dudas diagnósticas.
en el enfermo o sus familiares.
La RMN identifica claramente las cavidades medula-
Evolución y pronóstico
res. El estudio debe completarse con el del cerebro Al principio la siringomielia sigue un curso rápido,
y toda la médula para definir las malformaciones que en poco tiempo obliga al enfermo a suspender
asociadas y si hay hidrocéfalo. El examen realizado sus labores. Quizás por esta causa toma después un
con contraste permite el diagnóstico de un tumor curso lento, que no lleva a la muerte al paciente
medular asociado. Si no se dispone de RMN, debe has- ta transcurridos muchos años, excepto
hacerse una TAC, horas o días después de una cuando el proceso extendido al bulbo lesiona los
mielografía con compuesto yodado hidrosoluble, que centros vita- les. En el caso de bloqueo
visualizará la cavidad si el contraste la llena. subararcnoideo, puede producir ensanchamiento
del canal raquídeo y ero- sión de los pedículos
Diagnóstico diferencial vertebrales.
En la práctica son tres los procesos más importantes
que plantean el diagnóstico diferencial: hematomie- Tratamiento
lia, tumor intramedular y lepra. El tratamiento es quirúrgico. Se hace descompresión
Hematomielia. Provoca un cuadro similar al de la de la fosa posterior por craniectomía suboccipital o
seringomielia, por extravasación hemática intrame- laminectomía cervical alta y un implante de dura-
dular consecutiva a un traumatismo. Se establece en madre para corregir la hernia de las amígdalas cere-
forma aguda y evoluciona hacia la regresión con una
belosas. Si hay obstrucción al flujo en el cuarto
deficiencia estacionaria, no progresiva.
ventrículo, éste se restablece por agrandamiento de
Tumor intramedular. En algunos casos simula una
la apertura. También se realiza la compresión de la
siringomielia, de la que se distinguirá, entre otros
cavidad por aspiración del líquido que contiene.
datos evolutivos, por la presencia de un bloqueo de
En la malformación de Arnold-Chiari, después
la circulación del líquido cefalorraquídeo, que se
pone en evidencia por la prueba de Queckenstedt y de resuelto el hidrocéfalo, si es necesario, se
el síndrome de Froin, aunque en ocasiones la sirin- interviene sobre la cavidad. Los resultados son
gomielia produce estos mismos hallazgos. muy buenos. Cuando la siringomielia es secundaria
Lepra. Los trastornos sensitivos no son radicula- a un trau- matismo o a una infección, se realiza
res, sino tronculares. Los nervios suelen palparse descompresión y drenaje y se deja un pequeño
engrosados (el cubital, por ejemplo) y el bacilo se shunt al espacio suba- racnoideo. El tumor
aisla en la linfa. intramedular se extirpará si es posible hacerlo, y se
hará descompresión de la cavi-
dad, aunque la recurrencia es frecuente.
455
46
ENFERMEDADES DESMIELINIZANTES
La mielina es una sustancia semilíquida, reluciente, Estas enfermedades con daño primario de la
de naturaleza lipoproteica y color blanco amarillen- mielina pueden ser divididas en dos grandes
to, que recubre la inmensa mayoría de los axones grupos:
del SNC y del periférico, de la misma manera que
los cables eléctricos son recubiertos por un material 1. Las leucodistrofias, en las cuales la formación
de la mielina está afectada por la existencia de
aislante. En su composición, los lípidos más abun-
un trastorno metabólico determinado desde el
dantes son los cerebrósidos, fosfolípidos y coleste-
punto de vista genético.
rol, y las proteínas fundamentales, la proteína
2. Las enfermedades desmielinizantes
proteolípida, la proteína básica de la mielina y la
mielinoclás- ticas, en las cuales la mielina
glucoproteína relacionada con la mielina. En el sis-
normalmente for- mada se desintegra. Todo el
tema nervioso periférico, la mielina es producida desarrollo de este capítulo trata de manera
por las células de Schwann, que rodean al axón, exclusiva sobre las en- fermedades
mientras que en el SNC, la producción de la mielina desmielinizantes mielinoclásticas.
corre a cargo de la oligodendroglia.
Existe un gran número de enfermedades que afec- Desde el punto de vista anatomopatológico, los
tan el sistema nervioso y comprometen de una for- criterios comúnmente aceptados en una enfermedad
ma u otra a la mielina; sin embargo, no por ello se desmielinizante son:
clasifican como enfermedades desmielinizantes, ya
que su naturaleza suele ser muy diversa. Así, proce- 1. Destrucción de las vainas de mielina de las fi-
sos metabólicos carenciales, como la degeneración bras nerviosas.
combinada subaguda de la médula por déficit de vi- 2. Relativa indemnidad de los otros elementos
tamina B12 y la mielinólisis pontina central, de pro- (axones, soma neuronal, estructuras de sostén).
bable origen diselectrolítico; las neuropatías 3. Infiltrado inflamatorio de distribución peri-
periféricas, como la causada por la toxina diftérica, vascular.
y algunas enfermedades víricas del SNC, como la 4. Distribución peculiar de las lesiones, frecuen-
leucoencefalopatía multifocal progresiva y la panen- temente perivenosas y muy llamativas en la
cefalitis esclerosante subaguda, etc., son ejemplos
sus- tancia blanca, pequeñas y
de afecciones que cursan con desmielinización como
rasgo característico y a veces exclusivo del cuadro diseminadas, o mayores con uno o varios
anatomopatológico; sin embargo, por convención, centros.
no se agrupan en el capítulo de enfermedades des- 5. Ausencia relativa de degeneración secundaria
mielinizantes. La definición precisa de qué se en- o walleriana de las vías nerviosas.
tiende por enfermedad desmielinizante es compleja
y trata de llamarnos la atención hacia un grupo de Clasificación
dolencias del SNC de causa desconocida, en las cua-
les la afectación de la mielina es un hecho destaca- A continuación se expone una clasificación de las
do aunque no exclusivo. enfermedades desmielinizantes tomada de: Adams,
R. D., Victor, M. y Ropper, A. H.: Principles
of Neurology, 6ta. ed., 1997.

I. Esclerosis múltiple (esclerosis diseminada o


in- sular).

456
• Forma encefalomielopática crónica recurrente. mínimo a partir de los 50. Las mujeres son afecta-
• Esclerosis múltiple aguda. das más que los hombres en proporción de 2-3:1.
• Neuromielitis óptica. La EM no se distribuye de manera uniforme a lo
II. Esclerosis cerebral difusa de Schilder y escle- largo del planeta. En 1975, Kurtzke, luego de
rosis concéntrica de Balo. minu- ciosos estudios epidemiológicos, determinó
III. Encefalomielitis aguda diseminada. que exis- ten 3 zonas geográficas para EM en el
• Postsarampión, rubéola, varicela, viruela, pa- mundo:
peras, influenza y afecciones virales.
1. Áreas de alto riesgo, que corresponden a Nor-
• Posvacunación antirrábica y antivariólica.
teamérica, centro y norte de Europa, así como
IV. Encefalitis hemorrágica necrotizante aguda y
el sur de Australia y Nueva Zelandia, con una
subaguda.
prevalencia mayor de 25 casos por 100 000
• Forma aguda encefalopática (leucoencefali-
habitantes.
tis hemorrágica de Hurst).
2. Zonas intermedias o de riesgo moderado, que
incluyen al resto de Europa, sur de EE.UU. y
norte de Australia y Nueva Zelandia, donde
ESCLEROSIS MÚLTIPLE pre- dominan entre 5 y 25 casos por 100 000
habi- tantes.
Concepto 3. Zonas de bajo riesgo, cuya prevalencia es
menor de 5 casos por 100 000 habitantes.
La esclerosis múltiple (EM), también llamada es-
Comprende los países asiáticos, África y
clerosis diseminada, insular, polifocal o en placas,
Latinoamérica.
es una enfermedad crónica inflamatoria, inmunoló-
gica, desmielinizante, que afecta las vainas de Esta distribución peculiar ha servido de base a
mielina del SNC y se caracteriza por la dispersión numerosos estudios de todo tipo, y se ha
en el espacio y en el tiempo. En la EM, las lesiones comproba- do en los últimos años que, aunque
comprometen partes separadas del SNC; los sínto- efectivamente hay un gradiente norte-sur, existen
mas y signos no pueden ser justificados por un daño notables varia- ciones que indican que hay otros
único. Además, su curso clínico en la mayoría de factores implica- dos y no sólo la situación
las oportunidades se caracteriza por exacerbaciones geográfica; por ejemplo, las islas de Malta y
y remisiones. Sicilia, ubicadas muy próximas, exhiben
prevalencias de 4,0 y 53,3 / 100 000 habi- tantes,
Epidemiología y factores de forma respectiva. Existen evidencias de que los
etiopatogénicos factores étnicos tienen importancia en la sus-
ceptibilidad a la enfermedad; no se tiene hasta el
Probablemente ninguna otra enfermedad neurológi-
presente ningún reporte bien documentado de EM
ca haya sido objeto de tantos y diversos estudios
entre los esquimales, lapones, polinesios, melanesios,
epidemiológicos ni haya provocado tan diferentes micronesios, aborígenes australianos ni indios nor-
teorías sobre su origen. De acuerdo con el propósito teamericanos. La enfermedad es rara entre los asiá-
de este libro, sólo se señalarán los hechos más so- ticos y más rara aún entre los negros africanos no
bresalientes. mezclados.
La incidencia de la EM en niños es muy baja; Se ha observado una tendencia familiar bien de-
menos del 1 % del total de casos debuta por debajo finida hacia la EM; las investigaciones realizadas
de los 10 años. De ahí en adelante el riesgo va au- han encontrado que entre el 5 y 15 % de los pacien-
mentando con la edad y alcanza su pico entre los 20 tes con EM tienen algún otro familiar afectado.
y 30 años, cuando constituye la segunda enferme- Otro hecho que sugiere una causa genética es el
dad neurológica más frecuente, después de las epi- hallazgo de que determinados antígenos de
lepsias. Con posterioridad, la incidencia tiene una histocompatibili- dad (HLA) se encuentran más
caída abrupta después de los 40 años y el riesgo es frecuentemente en los pacientes con EM que en los
controles; éstos son el DR-2, DR-3, B-7 y A-3; se
cree que pudieran tratar- se de un marcador de
“susceptibilidad genética” para EM, pero esto aún
no está claro.
457
Se han realizado estudios que sugieren que el ries- rosáceo provocado por la pérdida de mielina,
go de EM es mayor en poblaciones rurales que ur- rodea- das de sustancia blanca con la cual
banas, mientras que otros aseguran lo contrario. Se contrastan. Aun- que pueden localizarse en toda la
ha relacionado su aparición con un sinnúmero de sustancia blanca encefalomedular, su distribución
agentes virales: virus del sarampión, HTLV-1, her- preferida es hacia los ángulos anteriores de los
pes virus tipo 6, virus del moquillo canino, “agente ventrículos laterales, cuerpo calloso y otras áreas
relacionado con la EM”, etc., pero no se ha encon- periventriculares. Otros sitios de elección son la
trado evidencia de una causa viral aislada. médula cervical, el tronco cerebral, cerebelo,
En suma, todos estos estudios epidemiológicos nervios ópticos y quiasma.
apuntan hacia un conjunto de elementos que impli-
can una relación entre la EM y algunos factores Aspecto microscópico
ambientales presentes en la infancia y que luego de Las características de las placas varían según su tiempo
años de latencia, causan la enfermedad en un indivi- de evolución. En las más recientes, la desmieliniza-
duo genéticamente susceptible. ción tiene una localización sobre todo perivenosa;
Basado en estos hechos, Poser postula la existen- hay degeneración de la oligodendroglia, reacción
cia de una susceptibilidad genética dada que posibi- neuroglial e infiltración perivascular con células
lita que al ponerse en contacto ese individuo con mononucleares y linfocitos; no hay afectación de
determinado estímulo antigénico, presumiblemente los cilindroejes. Las lesiones de algún tiempo de
una infección viral, una vacunación, etc., se provo- evolu- ción tienen un grosor mayor que las recientes;
que una reacción antígeno-anticuerpo vigorosa con en ellas se observa tejido fibroso glial prácticamente
infiltrado inflamatorio por linfocitos en las venas y acelular, en ocasiones con macrófagos
capilares encefálicos. Esto aún no causa desmielini- perivasculares; esto constituye la típica “placa
zación, pero sí un aumento mínimo en la permeabi- esclerótica”. Aunque aún se hallan cilindroejes
lidad de la barrera hematoencefálica (BHE) con intactos, muchos están destrui- dos. Entre estos dos
penetración de linfocitos B al SNC y bandas oligo- extremos se encuentran todas las gradaciones de
clonales en el LCR. Luego de un tiempo de latencia cambios histopatológicos, con le- siones de diverso
variable, por lo general de muchos años, si el orga- tamaño, forma y edad, de acuerdo con el curso
nismo se pone en contacto con un agente apropiado, clínico de la enfermedad.
que debe tener cierta similitud molecular con el pri-
mario, se desarrollará una respuesta inmunológica Cuadro clínico
vigorosa. Como resultado se originará una vasculi- En la clínica de la EM llama la atención lo variado
tis con incremento notable de la permeabilidad de la y complejo de los síntomas y signos, que son
BHE y paso de factor de necrosis tumoral alfa, in- capaces de simular casi cualquier otra enfermedad
munocomplejos, linfocitos B y T, complemento, ci- neuroló- gica. Esto es consecuencia de la
toquinas, macrófagos, interferón gamma, etc.; a distribución espe- cial y diseminada a lo largo del
continuación se produce edema, inflamación y pos- neuroeje de las placas de desmielinización. El
teriormente desmielinización. La mielina se destru- cuadro clásico descrito por Charcot, caracterizado
ye y queda sustituida por una escara glial, las por temblor intencional, voz escandida y nistagmo,
“placas” que han dado a la enfermedad su nombre. sólo aparece en un 10 % de los casos y con
frecuencia tardíamente. No obstan- te, existe una
Anatomía patológica marcada predilección de las lesiones por ciertas
Aspecto macroscópico áreas del SNC, lo que provoca que deter- minadas
El examen del encéfalo no revela alteraciones en su combinaciones de síntomas y signos sean
cara externa; la médula espinal puede tener cierta reconocidas por el clínico como sospechosas de
irregularidad. En la superficie de corte se observan EM. Los hechos que por lo común sugieren esta
múltiples lesiones diseminadas, las llamadas placas afección son la presencia de trastornos motores,
de desmielinización, las cuales son bien definidas, cerebelosos, visuales, del tallo cerebral,
de tamaño variable entre pocos milímetros y varios esfinterianos y emocio- nales, entre otros.
centímetros, ligeramente deprimidas, de color gris La enfermedad ocurre de forma monosintomáti-
ca o debuta con una gran variedad de síntomas y
signos neurológicos, representativos de placas de
desmielinización en diferentes sitios. Su inicio, en
458
ocasiones, es sobreagudo, simulando un accidente Babinski bilateral. Al igual que la neuritis óptica
vascular encefálico, y otras veces se presenta en retrobulbar, la mielitis transversa aguda no sólo
pocas horas, días, o incluso de forma lenta y progre- cons- tituye a veces el debut de una EM, sino que
siva a lo largo de varias semanas o meses. también la complica cuando ya está bien
En cualquiera de las variantes antes expuestas, lo establecida. Alre- dedor del 25 % de los pacientes
más común es que estas manifestaciones clínicas, que tienen un cua- dro de mielitis transversa aguda,
una vez instaladas, experimenten una mejoría espon- desarrollarán una EM en los años subsiguientes.
tánea parcial o total, para luego de un intervalo de La EM se presenta también con un síndrome
meses o incluso años, reaparecer acompañadas de cerebeloso aislado completamente constituido: ataxia
otras nuevas. Otras veces la enfermedad progresa de la marcha, dismetría, disdiadococinesia, voz
sin interrupciones de forma inexorable hasta provo- escandida, temblor intencional, etc., o la combina-
car la invalidez o la muerte del enfermo. ción de nistagmo, síndrome cerebeloso y
La afección comienza, en alrededor del 50 % de paraparesia espástica. Estas formas de ocurrencia
los pacientes, con debilidad, entumecimiento o es- son en extre- mo características de la EM y
cozor de una o más extremidades. Otros enfermos siempre debe consi- derarse ese diagnóstico ante su
refieren como síntoma inicial una sensación de cin- aparición.
turón o banda apretada en el tronco o las extremida- Otras veces las manifestaciones iniciales de la
des. En el examen físico se halla desde un ligero enfermedad se deben a lesiones en el tallo cerebral,
defecto motor de una o ambas extremidades inferio- las que son de muy diversa localización; el compro-
res, hasta una paraparesia espástica con ataxia, hi- miso del fascículo longitudinal medial provoca
perreflexia osteotendinosa, desaparición de los diplopia, oftalmoplejía internuclear (con frecuencia
reflejos cutaneoabdominales y signo de Babinski. bilateral), nistagmo de cualquier tipo, parálisis de la
En esta etapa temprana suelen existir dolores sordos mirada vertical hacia arriba, etc. La presencia de
de la columna lumbosacra, algia de tipo radicular o, oftalmoplejía internuclear bilateral en un adulto jo-
signo de Lhermitte (dolor de tipo fulgurante a lo lar- ven es altamente sugestiva de EM. Las lesiones de
go de la columna, los hombros y la espalda, provo- otras vías que discurren por el tronco encefálico,
cado por la flexión pasiva del cuello). ocasionan sordera súbita, vértigo, alucinaciones
La neuritis óptica retrobulbar es el síntoma ini- auditivas, tinitus, vómitos, parálisis de músculos
cial de la EM entre el 25 y 30 % de los enfermos, oculares o faciales aislados, mioquimias faciales,
con cifras aún más elevadas si el debut ocurre por anestesia facial transitoria, neuralgia trigeminal,
debajo de los 20 años. Consiste en una pérdida total etc. Los síntomas de disfunción vesical más
o parcial de la visión de un ojo, más raramente de comunes son el aumento de la frecuencia y urgencia
los dos, que se instala por lo general en varias horas miccional, incontinencia urinaria y nicturia; la
o a lo sumo en 3 o 4 días. El examen del fondo de retención urina- ria ocurre menos. También se ve
ojo es normal, aunque pasados varios días se obser- constipación o in- continencia fecal. Todos estos
va una papilitis y se plantea el diagnóstico diferen- síntomas se asocian frecuentemente con
cial con un papiledema. Al cabo de 2 semanas los impotencia en los hombres y en el caso de las
pacientes comienzan la recuperación de la función mujeres, disminución de la sensibili-
visual. La neuritis óptica retrobulbar, como ya se dijo, dad genital, con dispareunia y anorgasmia.
puede ser el síntoma inicial de una EM o aparecer Los síntomas y signos fundamentales antes seña-
en cualquier momento de su evolución. Del 40 a lados y los que se describirán a continuación, se
60 % de los enfermos que sufren neuritis óptica presentan al inicio de la enfermedad o en cualquier
retrobulbar, desarrollarán una EM en el transcurso momento de su evolución, aislados o en combina-
de los años venideros, la mayoría dentro de los 5 ción unos con otros, durante los llamados brotes o
primeros años. exacerbaciones; desaparecen parcial o totalmente
Otra forma de presentación de la EM es mediante durante las remisiones, vuelven a surgir una y otra
la llamada mielitis transversa aguda, consistente en vez, y dejan cada vez más secuelas. Esto da idea de
una paraparesia de instalación aguda (horas o pocos lo complejo y abigarrado de la expresión clínica de
días), con nivel sensitivo, disfunción esfinteriana y esta enfermedad.
Los trastornos mentales y emocionales consisten
en depresión e irritación, y son muy frecuentes;
otras
459
veces, por el contrario, el paciente está francamente autores la conceptúan como una variedad de
eufórico. También se observa una disminución de la EM y otros le conceden individualidad propia
memoria de fijación, una demencia constituida o un dentro del capítulo de las enfermedades des-
estado confusional psicótico; estos últimos hechos mielinizantes.
ocurren en las fases avanzadas de la enfermedad.
Dos síntomas importantes son la fatiga y la into- Formas clínico-evolutivas
lerancia al calor. La primera está presente en cerca Existen varias subdivisiones de la EM atendiendo a
del 90 % de los enfermos con EM y consiste en una su curso clínico evolutivo; tales son:
lasitud o cansancio irresistible, generalizado, que se
presenta a cualquier hora, aunque puede seguir un 1. EM en forma de brotes y remisiones. Es la
patrón cíclico durante el día; su aparición obliga al clá- sica presentación de la EM, en la cual se
paciente a irse a la cama. Por otra parte, es clásica la defi- nen claramente períodos de
tendencia al empeoramiento de los síntomas en los empeoramiento de la enfermedad (brotes)
enfermos con EM al exponerse a temperaturas ele- seguidos por otros de recuperación parcial o
vadas, a tal punto que durante muchos años se utili- total (remisiones).
zó la prueba del baño caliente como elemento 2. EM progresiva primaria. Tiene un curso pro-
diagnóstico de la enfermedad. gresivo desde el inicio con empeoramiento
Los diferentes síntomas y signos que constituyen con- tinuo, que no es alterado por episodios de
el cuadro clínico de la EM, ya descrito, al combi- brotes ni remisiones.
narse unos con otros, dan origen a determinados 3. EM progresiva secundaria. Se trata de una en-
complejos sindrómicos: fermedad que comenzó en la forma de brotes-
remisiones y posteriormente se convirtió en
1. Forma mixta o generalizada (50 %), cuando progresiva con breves períodos de estabiliza-
coexisten más o menos con igual intensidad los ción y ligeras remisiones ocasionales.
signos visuales, cerebelosos, del tallo y medu- 4. EM progresiva con brotes sobreimpuestos.
lares. Tie- ne un curso progresivo desde el inicio y
2. Forma espinal (40 %), cuando predominan ne- en su evolución se insertan brotes claramente
tamente las manifestaciones de la médula espi-
defini- dos, que remiten o no. A diferencia de
nal, es decir, la paraparesia espástica y la toma
la forma brotes-remisiones, los períodos entre
de la sensibilidad profunda en las extremi-
un ataque y otro se caracterizan por una
dades.
constante pro- gresión de la enfermedad.
3. Forma cerebelosa o pontobulbocerebelosa (5 %).
4. Forma amaurótica (5 %). Los estudios realizados indican que alrededor
del 85 % de los pacientes debutan con la forma clí-
Variantes de la esclerosis múltiple
nica de brotes-remisiones y sólo el 15 % con una
1. EM aguda. En raras oportunidades, la EM adop- forma progresiva.
ta una forma altamente maligna, en la cual se
combinan manifestaciones cerebrales, del tron-
Exámenes complementarios
co cerebral y espinales, con una evolución muy Examen del LCR. Se detectan diferentes altera-
rápida, que en pocas semanas lleva al paciente ciones:
al estupor, coma, descerebración y muerte.
• Aumento de los linfocitos hasta alrededor
2. Neuromielitis óptica. Este síndrome clínico se
de 50/mm3 .
caracteriza por neuritis óptica uni o bilateral,
• Incremento de las proteínas hasta alrededor
acompañada de una mielitis ascendente o
de 100 mg/100 ml (1,0 g/L).
transversa, con todos los atributos sintomáti-
cos que dependen de cada cuadro. Éstos apare- • Aumento de la proporción de IgG mayor del 15 %
cen en cualquier orden, a veces con intervalos del total de proteínas.
de días o semanas entre uno y otro. Algunos • Índice de IgG (proporción entre la albúmina y
la globulina del suero y el LCR) mayor de 1,7.
460
• Presencia de bandas oligoclonales en la frac- y 30 % menos de oxígeno y glucosa comparado
ción gammaglobulina, al menos 2 en el LCR y con grupos control. Su empleo en esta enfermedad
ninguna en el suero. tam- bién está muy limitado al campo
• Aumento de la concentración de proteína bási- investigativo.
ca de la mielina. Es importante recalcar una vez más que aunque
estos medios complementarios son de extrema
La detección de cada una de estas alteraciones utili- dad en el diagnóstico de la EM, sólo deben
requiere de técnicas laboriosas y costosas; ninguna usarse en pacientes en los cuales exista una
es patognomónica de EM, pero cuando es posible sospecha clíni- ca, ya que ninguna de las
realizarlas todas, el LCR mostrará alteraciones en alteraciones antes descri- tas es patognomónica de
el 90 % de los pacientes. esta entidad. Diagnóstico
Potenciales evocados. Incluyen los potenciales
Diagnóstico positivo
evocados visuales (PEV), potenciales evocados
El diagnóstico de EM se hace difícil por la diversi-
somatosensoriales (PESS) y potenciales evocados
dad de síntomas y signos presentes, y su curso errá-
auditivos del tallo cerebral (PEATC). Estos estudios
tico e impredecible. Por tal motivo se han
neurofisiológicos proporcionan evidencia paraclínica
establecido diferentes criterios diagnósticos
al detectar lesiones totalmente asintomáticas en el
(criterios de Schu- macher, criterios de Allison y
SNC.
Miller, etc.), pero los de Poser (1983) son los que
Resonancia magnética nuclear (RMN). Sin duda
gozan de aceptación universal. Éstos dividen la
alguna es el estudio de neuroimagen más útil en la
enfermedad en 4 catego- rías:
EM. Demuestra la existencia de placas de desmieli-
nización hasta ese momento asintomáticas, presen- 1. EM clínicamente definida:
tes en el cerebro, tronco cerebral, cerebelo, nervio • Dos brotes y evidencia clínica de dos lesio-
óptico y médula espinal. Se observan en las vistas nes separadas en tiempo y localización en
de T-2 lesiones múltiples, hiperintensas, asimétricas, el SNC.
bien delimitadas, con gran tendencia a la distribu- • Dos brotes, evidencia clínica de una lesión
ción periventricular. Su positividad es superior al 90 %; y paraclínica de otra separada.
al utilizarse doble o triple dosis de contraste (gado- 2. EM definida con apoyo del laboratorio:
linium), su sensibilidad se incrementa y permite in- • Dos brotes, evidencia clínica o paraclínica
cluso valorar la edad de la placa de desmielinización. de una lesión y demostración en el examen
Tomografía axial computadorizada (TAC). Su uti- del LCR de síntesis intratecal de IgG o
lidad es más limitada en la EM que la de la RMN. bandas oligoclonales.
Empleando doble o triple dosis de contraste, se • Un brote, evidencia clínica de dos lesiones
detectarán las placas de desmielinización en un 40 separadas y LCR igual al anterior.
o 50 % de los casos. No obstante, es mucho menos • Un brote, evidencia clínica de una lesión y
costosa que la RMN y permite excluir una serie de paraclínica de otra con LCR igual al an-
procesos capaces de simular la EM, como tumores, terior.
abscesos, enfermedad cerebrovascular, etc. 3. EM clínicamente probable:
Tomografía computadorizada con emisión de fo- • Dos brotes y evidencia clínica de una sola
tón único (SPECT). Esta técnica utiliza marcadores lesión.
radiactivos con reconstrucción computadorizada en • Un brote y evidencia clínica de dos lesiones
una cámara gamma movible, a fin de medir la per- separadas.
fusión cerebral. Por el momento, su uso en la EM se • Un brote, evidencia clínica de una lesión y
limita al campo investigativo. paraclínica de otra separada.
Tomografía por emisión de positrones (PET). Usa 4. EM probable con apoyo del laboratorio:
radioisótopos de vida media muy corta, y es un mé- • Dos brotes con LCR igual a los anteriores.
todo de medición esencialmente del metabolismo
cerebral. Se estima que determinadas partes del cere- El concepto que prevaleció durante muchos años
bro de los pacientes con EM consumen entre 20 de que el diagnóstico de la EM era por exclusión,
461
debe abandonarse ante la existencia de criterios de- Tratamiento
finidos y uniformes para su identificación. No obs-
Como es de esperar, se han utilizado un sinnúmero
tante, es importante recordar que este diagnóstico
de esquemas terapeúticos, imposibles de revisar
nunca debe considerarse como definitivo hasta que
la evidencia sea inequívoca, ya que la EM es capaz por motivos obvios. A la luz de los conocimientos
de explicar prácticamente cualquier síntoma o signo ac- tuales, los medicamentos que aparentemente
neurológico ulterior y con ello distraer nuestro pen- tienen algún efecto sobre el curso de la
samiento de otra entidad, quizás tratable o curable. enfermedad y so- bre las placas de
desmielinización son los esteroi- des, los
Diagnóstico diferencial interferones beta y el copolímero I.
Cuando la enfermedad sigue un curso típico, es de- Esteroides. El uso de dosis masivas de
cir, brotes y remisiones con evidencia de lesiones metilpred- nisolona (500 mg EV/día durante 3 a 5
diseminadas en el SNC, el diagnóstico no ofrece días), segui- do de prednisona por vía oral a razón
dudas. No obstante, el primer brote puede ser con- de 60 a 80 mg diarios, con retirada gradual en 15 o
fundido con cierto número de afecciones y existen 20 días, ha de- mostrado su eficacia en abortar o
otras que son capaces de provocar lesiones a dife- limitar un brote de EM. También se emplea este
rentes niveles y simular EM. Entre ellas están la sí- esquema en el caso de una neuritis óptica
filis meningovascular, malformaciones vasculares retrobulbar, combinado con ant- inflamatorios no
del tronco cerebral y la médula espinal, gliomas del esteroideos (AINE) si el dolor lo requiere. La
tronco cerebral, encefalomielitis aguda diseminada, utilización de esteroides únicamente por vía oral es
LED, enfermedad mixta del tejido conectivo, mucho menos efectiva y como no se ha
periarteritis nudosa, síndrome de fatiga crónica, demostrado su eficacia fuera de los brotes, no se re-
brucelosis, enfermedad de Lyme, neurosarcoidosis, comienda su uso de forma prolongada. Tampoco es
tumores o espondilosis cervical, platibasia con im- útil la administración por vía intratecal.
presión basilar, paraparesia por HTLV-1, tumores
Interferón beta. Existen 3 productos comerciales:
del foramen magno, del clivus y del ángulo ponto-
a) Betaserón (interferón beta 1-b), de uso subcu-
cerebeloso, las ataxias hereditarias, el linfoma cere-
táneo en días alternos.
bral, el SIDA, etc.
b) Avonex (interferón beta 1-a), de administra-
Evolución y pronóstico ción semanal por vía IM.
c) Rebif (interferón beta 1-a), que se utiliza 3
El curso clínico de la EM es en extremo variable.
veces por semana por vía subcutánea. Este úl-
Los pacientes evolucionan de forma crónica, con bro-
timo aún no aprobado por la FDA.
tes y remisiones separados por años, o de manera
invariablemente progresiva desde el comienzo, con Estos tres productos son capaces de disminuir el
un pronóstico peor. La postración y las enfermeda- número y severidad de los brotes, así como reducir
des intercurrentes son habituales en los estadios fi- el tamaño de las placas de desmielinización, hecho
nales en ambas situaciones. Un tema muy discutido comprobado por la RMN.
ha sido el papel del embarazo en el empeoramiento Acetato de glatiramer, copolímero I o copaxone.
de los síntomas de la EM; se sabe en la actualidad Es un polímero de la proteína básica de la mielina,
que no tiene un efecto adverso sobre la enfermedad que se administra diariamente por vía subcutánea.
y de hecho hay una tendencia a la estabilización clí- Ha probado ser útil para disminuir el número y se-
nica durante éste. No obstante, se plantea un riesgo veridad de los brotes en la forma clínica brotes-re-
aumentado de brotes en los primeros 3 meses des- misiones.
pués del parto. Ciclofosfamida. Se ha usado sola y en combina-
La supervivencia es muy variable y aunque un ción con la azatioprina, en pequeños grupos de pa-
pequeño número de pacientes fallecen durante los cientes, fundamentalmente en las formas crónicas,
primeros meses o años luego del debut, el promedio con resultados contradictorios.
de supervivencia actual se sitúa entre los 25 y 30 Tratamiento de los trastornos vesicales. Las
años. sepsis urinarias deben prevenirse y tratarse de
forma enér- gica. Si una vejiga espástica provoca
dificultades para el almacenamiento, se usa
propantelina u
462
oxibutina (Ditropán). Si hay retención urinaria, se grados de hemiplejía o cuadriplejía con parálisis
efectuarán cateterismos intermitentes. seudobulbar y neuritis óptica. Su evolución es
Tratamiento de la espasticidad. Se trata con inexo- rablemente progresiva en algunos casos,
baclofeno, dantrolene sódico, diazepam o clonaze- mientras que en otros se mantiene estacionaria por
pam. El baclofeno se usa por vía oral o intratecal, de algunos años. Esto provoca que la mayoría de los
forma sostenida. De no resultar efectivo, puede enfermos fallezcan en pocos meses o años,
intentarse una solución quirúrgica (rizotomía dor- mientras otros so- breviven 10 años o más.
sal, sección de los nervios obturadores). Anatomopatológicamente se observa un gran
Tratamiento de los síntomas sensitivos. Se em- foco asimétrico de desmielinización, bien
plea la carbamazepina, difenilhidantoína, gabapen- delimitado, que de manera usual ocupa todo un
tina, amitriptilina, etc., con resultados variables. lóbulo de un hemis- ferio y por vía del cuerpo
Tratamiento de la fatiga. Se utiliza la amantadi- na, calloso afecta el otro he- misferio. Es posible
metilfenidato o paroxetina. También se ha des- crito encontrar lesiones diseminadas en el nervio óptico,
la eficacia de los baños fríos, tomar líquidos tronco cerebral y médula espinal. Desde el punto de
fríos abundantes, etc. vista histológico las lesiones son similares a las de
Tratamiento del temblor. Se han usado clonaze- la EM, por lo que permanece en pie la cuestión de
pam, propranolol, primidona, baclofeno, etc., con si se trata de una entidad inde-
resultados poco satisfactorios. Otro recurso es la pendiente o una variante de la EM.
talamotomía ventrolateral. La esclerosis concéntrica de Balo es probable-
Otros procederes como la oxigenación hiperbári- mente una variante de la enfermedad de Schilder,
ca, el empleo de polipéptidos sintéticos, dieta baja de la cual se distingue por la ocurrencia de bandas
en grasas, etc., no tienen una fundamentación sólida alternantes de destrucción y preservación de la
para su empleo. mielina en una serie de anillos concéntricos.
Tratamiento rehabilitador. De enorme importan-
cia en la EM, se concibe en la actualidad a través de
equipos multidisciplinarios: fisiatra, neurólogo, psi- ENCEFALOMIELITIS
cólogo, logopeda, psiquiatra, enfermera especiali-
zada, personal técnico de apoyo y familiares. AGUDA DISEMINADA
Contribuye a restituir habilidades, a prevenir com-
plicaciones de todo tipo y a enfrentar la enfermedad Es un trastorno agudo encefalítico y mielítico, de
desde una perspectiva distinta, prolongando el tiem- evolución y gravedad variables, caracterizado clíni-
po de autovalidismo del paciente. Hoy existen una camente por la presencia de síntomas que indican
serie de medios tecnológicos (sillas de ruedas lesión de la sustancia blanca del cerebro, de la mé-
autopropulsadas, aditamentos en los automóviles, dula espinal o de ambas.
lavabos portátiles, andadores electrónicos, etc.) que Desde el punto de vista anatomopatológico exis-
permiten al enfermo una independencia relativa hasta ten numerosos focos de desmielinización extendi-
fases avanzadas de la enfermedad. dos por todo el cerebro y la médula espinal, con
diámetro entre 0,1 y 1 mm., que se sitúan de forma
invariable alrededor de una vena de pequeño o me-
ESCLEROSIS diano calibre; los axones y células nerviosas están
más o menos intactos. Igualmente característica es
CEREBRAL DIFUSA la reacción inflamatoria formada por la microglia,
que se corresponde con las zonas de desmieliniza-
También conocida con el nombre de enfermedad de ción, y células linfocíticas y mononucleares que ro-
Schilder o encefalitis periaxial difusa. Es una afec- dean los vasos. La infiltración meníngea multifocal
ción poco frecuente, no familiar y que aparece en la es rara.
infancia y adolescencia. Desde el punto de vista clí- El síndrome clínico puede seguir a una vacuna-
nico se caracteriza por demencia, hemianopsia ho- ción o a una enfermedad infecciosa, exantemática o
mónima, ceguera y sordera corticales, diversos no, y de ahí la denominación de encefalitis posva-
cunal, posinfecciosa y posexantemática.
463
Encefalitis posvacunal tas en la encefalitis posvacunal: lo más común es
que entre 2 y 4 días luego del inicio del rash, se
Es la encefalitis consecutiva a una vacunación, ge- produzca una repentina reaparición de la fiebre,
neralmente la antivariólica, aunque se ve también con coma profundo y convulsiones; ocurre, con
después de la vacunación antirrábica y, de forma muy menos frecuencia, una hemiplejía o signos de
rara, luego de la administración de toxoide tetánico. afectación cerebelosa. Ocasionalmente aparece
Su incidencia ha disminuido de manera sensible, ya una mielitis transversa, trastornos esfinterianos y
que la viruela parece haber desaparecido de la faz otros signos de afectación medular. De forma rara
de la tierra y, por tanto, la vacunación antivariólica se presenta corea o movimientos atetósicos. A
veces se encuentran cuadros leves con ligera
es cada vez menos frecuente.
cefalea, somnolencia, fie- bre, confusión mental y
El cuadro clínico se ve predominantemente en
signos de irritación me- níngea.
niños de edad escolar. Entre 7 y 12 días luego de la
La encefalopatía postsarampionosa es la que cur-
vacunación, comienza de forma brusca con cefalea,
sa con mayor gravedad clínica y lesiones
letargo, fiebre, vómitos, rigidez de nuca y a veces
neurológi- cas más intensas; las consecutivas a la
convulsiones. Después se instala una paraplejía o
varicela y rubéola son por lo general más
cuadriplejía fláccida; aparecen nistagmo, parálisis
oculares, alteraciones pupilares y a veces trismo, benignas, de carác- ter regresivo y transitorio.
seguido por estupor y coma profundo. El LCR mues- La mortalidad está entre 10 y 20 %; la mitad de
tra hiperproteinorraquia y pleocitosis linfocitaria. La los sobrevivientes se recuperan por completo y la
muerte sobreviene casi siempre en los primeros 4 otra mitad queda con graves secuelas motoras, epi-
o 5 días, a causa del coma profundo y parálisis lepsia o trastornos del comportamiento. El
bulbar. La letalidad es alta, entre 30 y 50 %; los tratamiento que se preconiza es igualmente el uso
sobrevi- vientes pueden tener recuperación total o de esteroides, plasmaféresis y la inmunoglobulina
con más frecuencia quedar con signos neurológicos humana.
residua- les, deterioro intelectual y secuelas Es bueno recordar que las enfermedades exante-
psiconeuróticas. Se recomienda el uso de esteroides máticas tienen otras complicaciones neurológicas,
precozmente y a altas dosis. También se ha utilizado además de la encefalomielitis aguda diseminada,
la plasmafé- resis y la inmunoglobulina humana EV, con las que se debe hacer el diagnóstico diferencial;
con resulta- den- tro de ellas, las tromboflebitis cerebrales,
dos variables. encefalo- patía hipóxica y el síndrome de Reye.
Muy raramente, la encefalomielitis aguda dise-
Encefalitis posinfecciosa minada de cualquier causa se continúa con algunos
de estos síndromes clínicos: la encefalomielitis di-
y posexantemática seminada recurrente y la encefalomielitis
Un grupo numeroso de las enfermedades desmieli- disemina- da multifásica. La encefalomielitis
nizantes agudas de tipo infeccioso es consecutivo a diseminada recurrente se caracteriza por su
afecciones exantemáticas. El sarampión es el res- sintomatología este- reotipada. Luego de un
ponsable del mayor número de casos, aunque se pre- episodio inicial de encefalo- mielitis aguda
senta también después de cualquier exantema, como diseminada, ocurren uno o más ataques que
la varicela o la rubéola; la escarlatina rara vez es la reproducen una parte o todos los sínto- mas del
causa de esta complicación. Otras veces la desmie- cuadro original. La RMN es similar a la de la
linización sobreviene después de cuadros infecciosos encefalomielitis aguda diseminada. Por su parte, en
no exantemáticos, como parotiditis, mononucleosis la encefalomielitis diseminada multifásica, lue- go
infecciosa, tétanos, tosferina, influenza, neumonía del episodio inicial, se presentan cuadros sucesi-
por micoplasma, infecciones estreptocócicas o por vos con sintomatología clínica diferente. Es decir,
virus de Epstein-Barr, citomegalovirus, etc. la historia clínica de la encefalomielitis diseminada
Aunque es común que las manifestaciones clíni- multifásica es similar a la de la EM, pero la RMN
cas sean muy variables, suelen remedar las descri- aclarará el diagnóstico.
464
tológico es parecido, por su distribución perivascu-
ENCEFALOMIELITIS lar, al de la encefalomielitis aguda diseminada, con
HEMORRÁGICA la característica adicional de una necrosis más ex-
tensa y una tendencia de las lesiones a formar gran-
NECROTIZANTE des focos en los hemisferios cerebrales.
Desde el punto de vista clínico, la afección guar-
AGUDA da similitud con la encefalomielitis aguda disemi-
nada, pero su comienzo es de forma apoplética y en
(LEUCOENCEFALITIS ocasiones los signos neurológicos son unilaterales
o de tipo bulbares, lo que evidencia la naturaleza
AGUDA focal de la afección. La TAC y la RMN facilitan
HEMORRÁGICA grande- mente el diagnóstico al mostrar las
lesiones cere- brales masivas de la sustancia
DE HURST) blanca. La muerte del enfermo ocurre por lo
general en un plazo no mayor de 2 a 4 días.
La causa de esta enfermedad permanece ignora-
Esta enfermedad, la más fulminante de todas las da, pero su similitud con otras desmielinizantes es
desmielinizantes, afecta fundamentalmente a adul- notable. El parecido de los cambios histológicos
tos jóvenes, pero también a niños. De forma casi con los de la encefalomielitis aguda diseminada,
invariable es precedida por una infección respirato- sugiere que las dos enfermedades no son más que
ria, a veces por Mycoplasma pneumoniae, con más formas relacionadas de un mismo proceso
frecuencia de causa incierta. fundamental. Debe señalarse también que entre el
Consiste en una encefalomielitis fulminante con escaso número de pacientes que sobrevivieron a lo
afectación de la sustancia blanca de uno o ambos que parecía ser una encefalomielitis hemorrágica
hemisferios cerebrales, que aparece destruida, casi a necrotizante agu- da típica, unos pocos
punto de licuefacción, con múltiples áreas de pe- desarrollaron más tarde EM. Esto ha motivado que
queñas hemorragias. El examen histológico mues- algunos autores preconicen el uso de esteroides en
tra necrosis de los vasos sanguíneos y del tejido esta entidad. Se estudia la posi- ble utilidad de la
perivascular con infiltración celular. El cuadro his- plasmaféresis.
465
47
ATROFIAS MUSCULARES
Concepto • Distrofia de la cintura escapular y pelviana.
• Distrofia oculofaríngea.
La atrofia muscular es la disminución del número y
• Miopatías congénitas: central y nemalínica
volumen de las fibras musculares, que se manifies-
centro-nuclear.
ta por una reducción evidente o demostrable con
• Miopatías metabólicas: trastornos del me-
medidas del calibre del músculo. Las porciones atro-
tabolismo del glucógeno, de los lípidos y
fiadas son sustituidas por tejido fibroso y graso.
de nucleótidos de la purina.
Clasificación • Miotonía congénita.
Desde el punto de vista general, la atrofia se debe a • Paramiotonía.
una enfermedad propia del músculo (atrofias • Parálisis periódica hipocaliémica y normo-
protopáticas) o a una del sistema nervioso (atrofias caliémica.
deuteropáticas), específicamente a las lesiones de 2. Secundarias (adquiridas).
la neurona motora periférica, que rige el trofismo a) Inflamatorias:
muscular. • Colagenosis: lupus eritematoso disemi-
Las atrofias protopáticas pueden ser primarias nado, artritis reumatoidea, escleroder-
(enfermedad propia del músculo) y secundarias o mia, enfermedad mixta del tejido
sintomáticas de alguna enfermedad, que dentro de conectivo, polimiositis y dermatomiosi-
su cuadro clínico incluye lesión muscular. En gene- tis.
ral existen 5 grupos de atrofias protopáticas: distro- • Sarcoidosis: síndrome carcinoide.
fias musculares, miositis, miopatías endocrinas, • Infecciones: virales (gripe), proto-
metabólicas y miastenia grave. zoarios (toxoplasmosis), parasitarias (tri-
Las atrofias graves deuteropáticas se deben a le- quinosis).
siones que afectan las astas anteriores de la médula b) Endocrinas y metabólicas:
(mielopáticas) o a aquéllas de las raíces anteriores • Alteraciones electrolíticas: calcio, fos-
de los nervios periféricos (radiculoneuríticas). A
fato, magnesio, sodio, potasio.
veces daña a toda la neurona motora periférica
• Endocrinas: hiperfunción e hipofunción
(mieloneurítica).
tiroidea, suprarrenal, paratiroidea e hi-
Las atrofias musculares que se observan en el
pofisaria.
curso de lesiones piramidales no son verdaderas atro-
c) Tóxicas: alcohol, opiáceos, pentazocina,
fias, ya que se deben al desuso.
clofibrato, otros.
A continuación se expone una clasificación de
d) Tumores y lesiones seudotumorales: tu-
las atrofias musculares.
mores primarios y metastásicos, infeccio-
nes, miositis osificante, calcinosis,
A. Atrofias musculares protopáticas.
ruptura muscular.
1. Primarias (hereditarias).
• Distrofia muscular de Duchenne. B. Atrofias musculares deuteropáticas.
• Distrofia miotónica. 1. Mielopáticas.
• Distrofia facioescapulohumeral. a) Poliomielitis anterior aguda.
b) Enfermedad de Aran-Duchenne.

466
c) Parálisis bulbar progresiva. de ellas, la distrofia muscular progresiva de
d) Esclerosis lateral primaria. Duchenne para describirlas. Las atrofias deuteropá-
e) Esclerosis lateral amiotrófica. ticas mielopáticas serán tratadas en el capítulo si-
f) Atrofia muscular familiar. guiente.
2. Radiculoneuríticas.
a) Polineuropatías.
3. Mieloneuríticas. DISTROFIA
a) Neuritis intersticial de Charcot-Marie-
Tooth. MUSCULAR
b) Neuritis hipertrófica familiar de Déjeri-
ne-Sottas. PROGRESIV
Cuadro clínico A
La sintomatología depende de la enfermedad, pero
en general los pacientes comienzan a notar debili- Concepto
dad progresiva en los movimientos y más tarde des- Es una miopatía heredofamiliar de origen genético
cubren alteraciones en la morfología muscular. Las ligada al sexo. La mayoría de los casos comienza
sensaciones parestésicas y las fasciculaciones muscula- antes de los 10 años de edad.
res se presentan en determinados tipos de atrofia.
En el examen físico se comprueban las atrofias Etiopatogenia
musculares por la inspección y, además, por medio La distrofia de Duchenne se debe a la mutación de
de medidas que serán comparativas y se tomarán en un gen responsable de la producción de distrofina,
puntos de referencia simétricos. proteína localizada en la superficie interna del
Lo fundamental ante estos cuadros es precisar si sarcolema de la fibra muscular. Este gen se encuen-
una determinada atrofia muscular es protopática o tra en el brazo corto del cromosoma X en Xp 21.
deuteropática.Las protopáticas afectan por lo gene- La detección de la mutación no sólo permite el
diag- nóstico de la enfermedad, sino también el
DIFERENCIAS ENTRE LAS ATROFIAS estado de portador, y en las células del líquido
amniótico, el diagnóstico prenatal.
La distrofina forma parte de un complejo de pro-
PROTOPÁTICAS Y DEUTEROPÁTICAS teínas y glicoproteínas del sarcolema de la fibra
Índices Protopáticas Deuteropáticas
muscular. Además de la distrofina, se han identifi-
Localización. Proximales. Distales. cado los distroglicanos a(alfa) y b(beta) y la
Fasciculaciones. Ausentes. Presentes. factina, todos los cuales forman parte del grupo 1
Velocidad de conduc- Normal. Disminuida. ción del com- plejo de proteínas y glicoproteínas ya
nerviosa.
Electromiograma. Patrón miopático. Patrón de des- mencionado. Del grupo 2 se conocen los
vervación. sarcoglicanos a, b, g
Trastornos neuroló- Ausentes. Presentes. (gamma) y d (delta), y del grupo 3, la laminina,
gicos.
que es un componente integral de la lamina basal.
Relación familiar. Sí. No.
Este complejo glicoproteína-distrofina confiere
estabilidad al sarcolema y la deficiencia de uno de
ral, en los miembros superiores, a los músculos
ellos causa pérdida de otros componentes. Así, la
bíceps,cervicobraquial, braquial anterior, serrato
deficiencia de distrofina en la distrofia muscular
mayor y pectorales, mientras que el tríceps y el
deltoides están relativamente respetados; en los pro- gresiva (DMP) debilita el sarcolema, causa
miembros inferiores el cuádriceps y el tibial ante- rasga- duras de la membrana y entonces se
rior son los más tomados. Dado el objetivo de este desarrolla una cascada de eventos que lleva a la
libro, no es posible hacer una descripción de cada necrosis de la fibra muscular.
una de las atrofias musculares protopáticas, afeccio-
nes poco frecuentes y hasta raras. Se escogerá una Anatomía patológica
Se encuentra disminución del volumen muscular.
Los músculos son pálidos y recuerdan en
ocasiones la

467
carne del pescado. En algunas formas clínicas el bilidad y atrofia de los hombros. Las contracturas
volumen muscular está aumentado por sustitución son comunes en los períodos avanzados de la enfer-
de las fibras musculares atrofiadas por un tejido medad y cuando toman la pantorrilla, ocasionan el
escleroadiposo (seudohipertrofia). Las fibras pier- pie equino y el paciente, si aún puede marchar, lo
den su estriación normal. Los husos neuromusculares hace en la punta de los pies.
permanecen intactos. La facies miopática consiste en borramiento de
los pliegues y las arrugas, sonrisa transversal sin le-
Cuadro clínico vantar las comisuras labiales y labio superior
La enfermedad está presente desde el nacimiento, saliente, todo lo cual se debe al desequilibrio que se
aunque se manifiesta entre los 3 y 5 años. El pacien- estable- ce entre los diferentes músculos.
te experimenta dificultad para caminar y especial- Los reflejos osteotendinosos se mantienen nor-
mente para levantarse de una silla o subir una males mientras las atrofias no son muy marcadas.
escalera a causa de la afectación de los músculos de No hay alteraciones de la sensibilidad ni fascicula-
la cintura pelviana. La marcha es contoneante, mo- ciones musculares. El 30 % de los enfermos
viendo y balanceando las caderas de un lado a otro presen- ta retraso mental. Con gran frecuencia
(marcha de pato). Cuando el enfermo está en decú- hay una miocardiopatía, pero la insuficiencia
bito dorsal, para poder levantarse tiene que girar cardíaca no es común, excepto en presencia de un
sobre sí mismo, ponerse en decúbito ventral, arrodi- stress severo
llarse en la mesa y luego trepar sobre su propio (neumonía, infección grave). Se observan taquicar-
cuerpo apoyándose con las manos para incorporar- dia persistente y arritmias variadas. El electrocar-
se (Fig. 47.1). diograma muestra en los casos típicos RS en V1,
La afectación de otros grupos musculares provo- ondas Q estrechas y profundas en las derivaciones
ca lordosis lumbar, escoliosis, escápulas aladas, de- precordiales y otras veces un patrón de bloqueo de
rama derecha.

Exámenes complementarios
Creatinfosfoquinasa sérica( CPK). Está muy eleva-
da desde el nacimiento (más de 10 veces lo
normal); luego va disminuyendo a medida que
decrece la masa muscular. Los familiares no
afectados clínicamente también presentan niveles
elevados de esta enzima.
Aldolasa. Está elevada en los enfermos y los fa-
miliares en apariencia sanos.
Deshidrogenasa láctica. Cuando se separa en
sus isoenzimas, muestra un patrón típico de
atrofia muscular de Duchenne, que consiste en un
aumento de las isoenzimas 1 y 2 y disminución de
las 3, 4 y 5. Estudios neurofisiológicos. La
velocidad de con- ducción es normal y el
electromiograma muestra el
patrón miopático típico.
Análisis de la distrofina. El análisis de la distrofina
(técnica de Western Blot) en la biopsia muscular,
en cuanto a su cantidad y tamaño molecular y la
tinción inmunocitoquímica con anticuerpos
antidistrofina, son diagnósticos de la enfermedad.
Fig. 47.1. Secuencia que muestra la forma característica de
incorporarse un paciente con distrofia muscular progresiva.
Diagnóstico
Diagnóstico positivo
Es relativamente fácil ante un niño o adolescente
con debilidad y atrofia de los músculos de la
cintura
468
pelviana, sin fasciculaciones ni trastornos de la sen- Miopatía ocular. Hasta 1951 se le conoció como
sibilidad, con una marcha contoneante o alguna di- oftalmoplejía nuclear progresiva, pues se suponía que
ficultad para incorporarse, quizás con antecedentes la lesión residía en los núcleos oculomotores. Se
familiares. afec- tan los músculos oculares extrínsecos y
tardíamente los esqueléticos. Su evolución es lenta
Diagnóstico diferencial y progresiva. Se hereda de manera autosómica
Distrofia muscular de Becker. Es también recesiva dominante. Pue- den haber anormalidades
ligada al sexo. Es conocida como la forma benigna retinianas. No hay diplopia. Cuando a la miopatía
de la distrofia de Duchenne, y al igual que en ésta, ocular se añade disfagia por participación de los
el defecto reside en el mismo gen. La edad de co- músculos faríngeos, se habla de miopatía
oculofaríngea. Se ha relacionado con el
mienzo es hasta la cuarta década y la expectativa de
cromosoma 14q, que contiene los genes para las ca-
vida alcanza la quinta. Los estudios enzimáticos y
denas pesadas a y b de la miosina cardíaca.
neurofisiológicos y la biopsia de músculos arrojan
Distrofia miotónica. Comienza generalmente des-
resultados similares a los de la enfermedad de pués de los 25 años. Hay canicie y calvicie preco-
Duchenne. El estudio de Western Blot en la biopsia ces. La catarata es característica. Se acompaña de
pone en evidencia distrofina anormal, pero no au- atrofia testicular (no ovárica) y disminución de la
sente. capacidad intelectual. Con frecuencia el enfermo
Distrofia rizomélica. Comienza por la cintura desarrolla una diabetes mellitus. Hay también daño
escapular (variedad de Erb) o por la cintura pelviana cardíaco.
(variedad de Leyden-Moebius). Se inicia en la ado- El fenómeno miotónico espontáneo o provocado
lescencia o juventud y evoluciona en forma lenta. da la clave del diagnóstico. La CPK es normal o
Su herencia es autosómica dominante o recesiva. El está ligeramente elevada. El electromiograma
análisis de Western Blot en la biopsia muscular para evidencia la miotonía. Los estudios genéticos han
distrofina y sarcoglicanos, permite su diagnóstico demostrado una secuencia repetida de
certero, ya que en esta distrofia hay un defecto de trinucleótidos en un gen de 19q13.3.
una proteasa activada por el calcio, que es específi- Miastenia grave. A veces es difícil el
ca del músculo, llamada calpaína 3. diagnóstico diferencial, ya que una DMP es capaz
Distrofia facioescapulohumeral (Landouzy-Déje- de evolucio- nar con un fenómeno miastémico
rine). Se manifiesta en la adolescencia y tiene un sobreañadido y, a su vez, una miastenia grave puede
curso lento. Como su nombre lo indica, comienza cursar con atrofias musculares.
por los músculos de la cara. Se hereda de manera Polimiositis. Esta enfermedad del colágeno no es
autosómica dominante. Es la más frecuente de las heredofamiliar, progresa con rapidez, las remisio-
distrofias musculares porque ocurre mientras hay nes son comunes y la afectación muscular es
fecundidad. No causa gran incapacidad. En ocasio- global, más que selectiva; la palpación de los
nes plantea dificultad diagnóstica con la forma proxi- músculos es dolorosa y las mucosas presentan el
mal de la enfermedad degenerativa de la vía motora cuadro clínico de “distrofia después de los 50
años”, que incluye la distrofia menopáusica.
voluntaria. La distrofia facioescapulohumeral ha sido
Atrofia muscular familiar. Representa un grupo
relacionada con el cromosoma 4q35.
de enfermedades familiares caracterizadas por atro-
Distrofia tipo distal. Comienza por los músculos
fias musculares proximales a causa de lesión de la
distales. Es muy rara y tiende a confundirse con las
neurona motora del asta anterior de la médula, de
enfermedades deuteropáticas, pero los estudios his- curso progresivo. Comienza desde el nacimiento o
tológicos y neurofisiológicos permiten su exacta ubi- la lactancia (enfermedad de Werdnig-Hoffman), en
cación. Parece ser un grupo heterogéneo de la adolescencia (atrofia familiar juvenil) o más
miopatías, algunas con herencia autosómica recesiva. tarde en la vida (enfermedad de Wohlpart-
Una de ellas se relaciona con un defecto en el cro- Kugelberg- Welander), y a veces sólo se
mosoma 2p12-14. A veces se inicia en edad tempra- diferencia de la DMP mediante los estudios
na (variedad Biemond), pero habitualmente aparece neurofisiológicos.
entre los 30 y 40 años (variedad Welander). Enfermedad degenerativa de la vía motora vo-
luntaria. Generalmente no es familiar y se inicia
por
469
las porciones distales de los miembros, presenta fas- can en activo lo más posible y a veces son necesa-
ciculaciones y los estudios neurofisiológicos son los rias correciones ortopédicas y el uso de aparatos
típicos de las atrofias musculares deuteropáticas. para prolongar el mayor tiempo posible su
Evolución y pronóstico independencia. Se realizará fisoterapia de los
músculos afectados, calor en forma de diatermia,
La afección no es mortal de por sí, pero invalida al rayos infrarrojos, etc. La dieta debe ser balanceada
paciente, que fallece por infecciones intercurrentes. y se utilizarán comple- jos multivitamínicos. Se
Si la miocardiopatía de esta enfermedad causa una recomienda la prednisona en dosis de 0,75mg/kg
insuficiencia, ésta pronto se hace refractaria. de peso / día, que detiene el progreso de la
Tratamiento enfermedad hasta los 3 años, aunque algunos
No existe tratamiento efectivo en esta enfermedad. pacientes no la toleran.
Se debe estimular a los pacientes a que permanez-
470
48
ENFERMEDAD DEGENERATIVA
DE LA VÍA MOTORA
VOLUNTARIA
Esta denominación comprende un grupo de afec- mo paciente (esclerosis lateral amiotrófica + enfer-
ciones consideradas por casi todos los autores como medad de Parkinson; esclerosis lateral amiotrófi-
formas clínicas de una sola alteración orgánica, que ca + enfermedad de Pick, etc.). Entre 5 y 10 % de
se caracteriza por lesiones degenerativas no infla- los casos son hereditarios, con un patrón autosómi-
matorias de la vía motora voluntaria, en parte o en co dominante (esclerosis lateral amiotrófica
su totalidad. familiar), y existen otros con herencia autosómica
Cuando la lesión asienta en las neuronas moto- recesiva. Otra forma familiar de esclerosis lateral
ras del asta anterior de la médula, produce una amiotró- fica es el síndrome de Kennedy, ligada
amiotrofia espinal progresiva o enfermedad de Aran- al sexo, y que además del cuadro neurológico
Duchenne; si se localiza en los núcleos motores de presenta insen-
los pares craneales, ocurre una parálisis bulbar pro-
sibilidad a los andrógenos.
gresiva; si afecta exclusivamente la vía piramidal Como factores predisponentes se han investigado
en los cordones laterales, tiene lugar entonces una el frío, los trastornos nutricionales, el alcoholismo,
afección rara llamada esclerosis lateral primaria o los embarazos, etc. Los traumatismos parecen tener
esclerosis espasmódica de Charcot-Erb, y cuando importancia como factor desencadenante en un nú-
es la vía motora voluntaria en su totalidad, es decir, mero limitado de casos.
las neuronas de la circunvolución frontal ascenden-
La observación de la EDVMV después de una
te (células piramidales de Betz), las astas anteriores
poliomielitis anterior aguda y el desarrollo del con-
medulares y los núcleos motores de los pares cra-
cepto de enfermedades por virus lentos del sistema
neales, se origina una esclerosis lateral amiotrófica
nervioso, han sugerido esta causa en la enfermedad
o enfermedad de Charcot.
degenerativa, todavía por confirmar.
Recientemente algunos autores incluyen en este
capítulo la paraplejía espástica familiar (otros con- Anatomía patológica
sideran esto de difícil aceptación).
Las lesiones anatomopatológicas son idénticas en
Etiología todas las afecciones que componen el grupo y sólo
existen variaciones topográficas entre ellas. Consis-
La enfermedad es más frecuente en el hombre que
ten en degeneración (cromatólisis) y destrucción
en la mujer, en una proporción de 2:1. La edad de
neuronal y proliferación de la neuroglia, sin que en
presentación oscila entre 45 y 60 años en más
ningún momento se observen elementos inflamato-
del 50 % de los casos, y entre 30 y 45 años en el 20 %.
rios.
Su aparición es excepcional antes de los 30 años.
Los axones de las neuronas destruidas sufrirán la
Ha sido descrita reiteradamente en varios miembros
degeneración de Waller.
de una misma familia. Asimismo, se han observa-
Con el ultramicroscopio se observan engrosamien-
dos otros cuadros neurológicos degenerativos en
tos esferoidales en la porción proximal del axón,
familiares de pacientes con esclerosis lateral amio-
compuestos por neurofilamentos.
trófica y en combinaciones de una enfermedad de-
En la amiotrofia espinal progresiva, las lesiones
generativa de la vía motora voluntaria (EDVMV)
se presentan en las astas anteriores de la médula,
con otra degenerativa del sistema nervioso en el mis-
sobre todo en el engrosamiento cervical.

471
En la parálisis bulbar progresiva, asientan en los se debe a la acumulación de radicales libres en la
núcleos motores de los pares craneales, principal- neurona motora.
mente en los correspondientes a los pares XII, XI,
X, VII (porción inferior) y a veces el V. Hay que Cuadro clínico
señalar la resistencia de las neuronas de los núcleos
de los pares oculomotores y las neuronas parasim- Amiotrofia espinal progresiva o enfermedad
páticas de la médula espinal sacra (núcleo de de Aran-Duchenne
Onufrowicz). Se presenta generalmente en edades inferiores a 40
En la esclerosis lateral amiotrófica ocurren en las años. Lo que más llama la atención es la atrofia
astas anteriores (engrosamiento cervical), en los muscular simétrica y progresiva. En el examen
núcleos motores de los pares craneales (los mismos físico se encuentran atrofias musculares de tipo
que en la parálisis bulbar progresiva) y, además, en mielopá- tico, que en la mayoría de los casos
las células piramidales de Betz de la circunvolución empiezan por los extremos distales de los
frontal ascendente. Es fácil comprender que al le- miembros superiores
sionarse las células de Betz, los axones que en ellas (tipo Aran-Duchenne), algunas veces por las extre-
se originan y cuya reunión constituye la vía pirami- midades inferiores y de forma excepcional por los
dal, sufrirán la degeneración walleriana; es por ello músculos de la cintura escapular (tipo Vulpian-
que en la esclerosis lateral amiotrófica se observan Bernhardt).
zonas dañadas en los distintos lugares por donde pasa La atrofia de los músculos de la eminencia tenar
la vía piramidal, como son: centro oval, brazo pos- e hipotenar, origina la “mano de mono”. Más tarde,
terior de la cápsula interna, pie peduncular, pirámi- cuando se atrofian los interóseos y lumbricales, la
des bulbares y cordones laterales de la médula. mano toma el aspecto de “garra”, y al afectarse los
Las fibras musculares inervadas por los axones músculos flexores del antebrazo, aparece la “mano
de las neuronas motoras afectadas en la médula es- de predicador”. La extensión del daño a otros múscu-
pinal y el tallo cerebral se atrofian. En las fases tem- los del miembro superior motiva la inmovilidad de
pranas pueden ser reinervadas por los axones vecinos éste, que permanece apoyado al tronco. Cuando se
indemnes, por un proceso de germinación. toman los músculos cervicales, la cabeza cae col-
Es de señalar que desde el punto de vista del exa- gando hacia el tórax.
men microscópico, las lesiones quedan limitadas al Los reflejos profundos están disminuidos o abo-
sistema motor, pero la tinción inmunoquímica de- lidos, según la participación de los grupos muscula-
muestra la existencia de neuronas que contienen res. A veces se detecta un signo de Babinski, que
ubiquitín, que es un marcador de degeneración neu- denuncia la participación de la primera neurona pi-
ronal; también se detectan cambios disfuncionales ramidal en el proceso. En todos los casos se obser-
del metabolismo de la glucosa en neuronas no mo- van fasciculaciones musculares y el
toras. electromiograma muestra el patrón de
desnervación.
Patogenia El cuadro clínico comienza a veces por un solo
La causa de la esclerosis lateral amiotrófica, que por miembro. La evolución es entonces progresiva,
lo común se toma como modelo representativo de pero de un curso lento. En esta variedad se han
todas las EDVMV, no está definida. Algunos estu- observa- do las mayores supervivencias (hasta 20
dios sugieren que neurotrasmisores excitotóxicos, años). En ocasiones la atrofia muscular
como el glutamato, contribuyen a la muerte de la generalizada da al en- fermo un aspecto de
neurona motora. La enzima superóxido dismu- caquexia extrema. Cuando par- ticipan los
tasa 1(SOD 1) es uno de los mecanismos de defensa músculos inervados por pares craneales bulbares,
de la neurona contra la toxicidad por neurotrasmi- el pronóstico se ensombrece.
sores, al detoxificar los radicales libres del anión su-
peróxido. La SOD 1 es patológica en algunas familias Parálisis bulbar progresiva
donde hay casos de esclerosis lateral amiotrófica, lo Los pares craneales que más frecuentemente se to-
que ha llevado a la hipótesis de que esta enfermedad man son el XII y la porción inferior del VII. El cua-
dro clínico característico lo constituye la parálisis
labioglosolaríngea. Se produce una disartria que
llega a la anartria, causada por la dificultad para la
mo-
472
vilización de la lengua. Ésta se atrofia de forma pro- En la variedad de esclerosis lateral amiotrófica
gresiva, así como los labios y los músculos de la que se desarrolla después de un traumatismo, los
cara. La paresia de las cuerdas vocales se traduce sig- nos neurológicos comienzan en la región
por afonía. La disfagia con regurgitación de líqui- agredida en un período que oscila entre 1 y 6
dos por las fosas nasales es frecuente, se observan meses después de éste. Las manifestaciones de
fasciculaciones en la lengua, el mentón y los labios. espasticidad son in- tensas. Frecuentemente los
El velo del paladar permanece inerte y no existe re- enfermos evolucionan con trastornos vasomotores
flejo faríngeo ni fenómeno de Verneth. y tróficos (periartritis, atrofia de Sudeck, etc.).
Al final sobrevienen trastornos respiratorios y La degeneración de las neuronas motoras cuyos
cardiovasculares (taquicardia, hipertensión, etc.) y axones forman la vía corticobulbar, produce un
el paciente fallece por broncoaspiración o por as- cua- dro clínico cuyas características
fixia, por lesión de los centros respiratorios. sobresalientes son la disartria y la afectividad
Esta forma clínica es la que peor pronóstico com- seudobulbar (excesivo llanto o risa involuntarios).
porta. Debe recordarse que la función de los esfínteres
vesical y anal permanece intacta durante toda la en-
Esclerosis lateral primaria o esclerosis fermedad.
espasmódica de Charcot-Erb
Los síntomas iniciales consisten en cansancio pre- Diagnóstico
coz y tirantez de una de las piernas, que en un perío- Diagnóstico positivo
do corto de tiempo se extienden a la otra pierna. Con Se establece ante un paciente con atrofias muscula-
la evolución de la enfermedad aparecen los signos res mielopáticas y signos de piramidalismo, un cur-
indicadores de la espasticidad muscular. La lesión so evolutivo progresivo, ausencia de síntomas y
piramidal pronto se manifiesta por hiperreflexia, hi- signos cerebelosos y vestibulares, y conservación
pertonía y clonus, mientras que el signo de Babinski de la función de los esfínteres vesical y rectal.
se presenta de forma inconstante sólo en las etapas
finales. En un período de 4 a 10 años se instalan las Diagnóstico diferencial
atrofias musculares y los síntomas que traducen la Entre las afecciones que a veces se confunden con
participación bulbar. Ésta es la forma clínica de más una EDVMV, se encuentran raros casos de siringo-
rara aparición en la EDVMV. mielia, tumores medulares, hematomielia, aracnoi-
ditis cervical, intoxicación por triortocresilfosfato, etc.
Esclerosis lateral amiotrófica o enfermedad Sin embargo, una historia detallada y la observa-
de Charcot ción evolutiva cuidadosa, pondrán en evidencia los
Si se reúnen los tres cuadros clínicos anteriores, se datos que aclararán el diagnóstico. El estudio cito-
tendrá el de la esclerosis lateral amiotrófica. En químico del líquido cefalorraquídeo, la mielografía
un 75 % de los casos la enfermedad comienza por y la tomografía axial computadorizada, en la mayo-
debilidad y atrofia de los músculos distales de los ría de los casos establece el diagnóstico de las dis-
tintas entidades neurológicas enunciadas.
miembros superiores, que al inicio con frecuencia
La biopsia muscular y el estudio
es asimétrica. Son habituales los calambres ante los
electromiográfico permiten distinguir la variedad
movimientos voluntarios, por ejemplo, al despertar
de Aran-Duchenne de las miopatías primarias y las
al enfermo y “estirarse” en la cama.
polimiositis.
Un número reducido de pacientes inicia su evo-
En alguna ocasión se planteará el diagnóstico di-
lución con manifestaciones bulbares y es el que peor ferencial de la EDVMV con la atrofia muscular fa-
pronóstico comporta. miliar (ver “Distrofia muscular progresiva”), grupo
Los signos pareticoespasmódicos generalmente de afecciones cuyo sustrato histopatológico es
son evidentes tras la iniciación de las atrofias, pero simi- lar al de la enfermedad degenerativa,
otras veces la preceden. La esclerosis lateral amio- aunque con muy poca participación bulbar y
trófica sigue un curso progresivo y acaba con la vida piramidal, pero que son familiares. Generalmente
del enfermo en 2 o 3 años. las atrofias son proxi- males en su comienzo,
predomina la falta de tono muscu- lar (amiotonía) y la
evolución es muy prolongada.
473
En algunos pacientes inmunodeprimidos, ya sea gico. Entre estas causas está la neuropatía multifo-
por enfermedad o por medicación citostática, se pre- cal motora con bloqueo de la conducción, que
senta un cuadro clínico semejante al de la EDVMV, ocurre por una lesión axonal difusa motora,
con lesiones medulares de amiotrofia espinal. El frecuentemen- te asociada a enfermedades
diagnóstico diferencial se establece por los antece- neoplásicas del sistema hemolinfopoyético, que
dentes de inmunodepresión del enfermo. cursan con un pico mono- clonal en el suero. El
Es necesario subrayar tres afecciones que, por síndrome neurológico parece estar causado por
razón de sus posibilidades terapéuticas, se deben anticuerpos dirigidos contra gangliósidos (GM1),
tener en cuenta en el diagnóstico diferencial. que producen desmielinización selectiva focal
Trastornos circulatorios orgánicos en el territo- paranodal de las neuronas motoras. Responde muy
rio de la arteria espinal anterior en la médula cer- bien a la terapéutica con gammaglo- bulina
vical. Las ramas paramedianas de esta arteria a nivel endovenosa o a la quimioterapia.
cervical, irrigan principalmente la sustancia gris de La intoxicación crónica por el plomo o saturnis-
las astas anteriores y los territorios mielínicos limí- mo y las tirotoxicosis, causan a veces un síndrome
trofes, hasta los haces piramidales laterales. La in- neurológico muy parecido a la esclerosis lateral
suficiente irrigación de estas zonas por obliteración amiotrófica. El diagnóstico de ambas enfermedades
vascular produce una atrofia muscular distal de los es fácil y la terapéutica específica suele detener el
miembros superiores y signos de piramidalismo en proceso neurológico y aún mejorarlo.
los inferiores. Finalmente, las fasciculaciones benignas consti-
Osteofitos vertebrales y lesión de los discos tuyen una fuente de preocupación para el que las
intervertebrales (sobre todo con protrusión media- padece y para el médico que es consultado, pero la
na). Producen estrechamiento del canal medular y ausencia de debilidad y de atrofia muscular, y
compresión de la arteria espinal anterior; el cuadro sobre todo del fenómeno de desnervación en el
clínico remeda al de la esclerosis lateral amiotrófi- electro- miograma, aclaran las dudas.
ca. Los tumores raquimedulares primarios o metas-
tásicos de la región cervical y del agujero occipital, Tratamiento
pueden ocasionar esta situación.
No hay medicamento capaz de curar o detener la
Neoplasias del pulmón, mama y estómago. Como
EDVMV. Las medidas de rehabilitación y
expresión paraneoplásica no metastásica, en ocasio-
fisiotera- pia, el uso de aditamentos ortopédicos y
nes originan un cuadro clínico indistinguible de las
en las fases finales el apoyo respiratorio con
variedades de la EDVMV. El síndrome neurológico
traqueostomía o sin ella, ayudan a obtener una
precede durante meses a la neoplasia (un caso de 11
mejoría en la calidad de vida de estos enfermos.
años) o se presenta después que el cáncer se haya
evidenciado. Si el tumor es extirpado, las manifes- Se recomienda la administración de vitaminas
taciones neurológicas se detienen y regresan. En el B1, B12 y E.
examen neurológico a veces se aprecia algún tras- El medicamento reluzole ha logrado una
torno sensitivo y la evolución es muy lenta. modesta prolongación de la supervivencia.
En casos de atipicidad en la clínica de estas en- Cuando la espasticidad molesta y entorpece la
fermedades por estar restringidas a una de las neu- motilidad, se recomienda el baclofeno, y si los ca-
ronas motoras, o porque se detecta compromiso de lambres son problemáticos, se utiliza la difenilhi-
la función de neuronas no motoras, o porque en los dantoína.
estudios neurofisiológicos se evidencie un bloqueo Algunos pacientes presentan salivación excesiva,
de la conducción nerviosa motora, se hace imperativo que se trata con amitriptilina, 10 mg 4 veces al día.
buscar una causa secundaria del síndrome neuroló- El factor neurotrófico ciliar y el de crecimiento
insulinoide están en fase de estudio.
474
49
POLINEUROPATÍAS
Se denomina neuropatía periférica a cualquier en- En la acromegalia, la neuropatía periférica puede
fermedad del sistema nervioso periférico. Se em- ser causada por proliferación excesiva de hueso o
plea el término de polineuropatía para designar un tejido blando, que aprisiona y comprime el nervio,
trastorno diseminado, casi siempre simétrico, que o ser producto de la proliferación fibrosa endo y
generalmente se traduce por pérdida o disminución peri- neural.
de la fuerza muscular y de la sensibilidad e hiporre- En la porfiria y la uremia, sigue señalándose la
flexia osteotendinosa de predominio distal. Si el acción combinada de factores carenciales, nutricio-
compromiso afecta un solo nervio, estamos en pre- nales y de productos metabólicos.
sencia de una mononeuropatía (mononeuropatía dia- Los mecanismos inmunológicos son también ele-
bética o neuropatía diabética asimétrica). Si se mento causal, como ocurre en las enfermedades del
detecta compromiso focal de más de un nervio peri- tejido conectivo y en el síndrome de Guillain-
férico, se está ante una mononeuropatía mútiple, Barré- Strohl.
La isquemia de los troncos nerviosos a veces ori-
como las que se ven también en la diabetes mellitus
gina manifestaciones polineuropáticas, motivo por
o en las vasculitis. En ambos casos se afectan los
el cual muchas afecciones vasculares producen cua-
vasa nervorum y se dañan varios nervios indivi-
dros de esta naturaleza.
duales.
Existen numerosas polineuropatías de tipo here-
dofamiliar, algunas perfectamente estudiadas y
Etiología
otras no tanto, pero con sus características clínicas
Las causas de polineuropatía son múltiples, al igual defini- das. Por otro lado, también hay algunas
que los mecanismos patogénicos, algunos de los polineuro- patías de causa oscura, que no pueden
cuales se conocen perfectamente mientras que otros ser incluidas en ninguno de los grupos anteriores,
son desconocidos. Las infecciones actúan por agre- pero que se pre- sentan con muy poca frecuencia.
sión directa del microrganismo al nervio, como su- Fisiopatología
cede en la lepra, en la que se produce el daño neural
Para que la fibra nerviosa tenga un funcionamiento
cuando la micobacteria penetra el nervio. En otros
adecuado, se requiere que el axón y la vaina de
casos, ocurre por acción directa de las toxinas sobre
mielina estén íntegros. Cuando se produce la sec-
el nervio, como pasa en la difteria. Las sustancias
ción del axón, el cabo proximal se mantiene vivo y
tóxicas, tanto las industriales como las ambientales,
se regenera, o al menos tiene la posibilidad para
son capaces de causar polineuropatías. ello, mientras que en el cabo distal hay
En las enfermedades endocrinas, como la diabe- degeneración y la mielina del muñón se rompe y
tes mellitus, se incluyen más de un factor etiológi- elimina.
co, como son: En las polineuropatías simétricas, por regla gene-
a. Anormalidades en los vasos y flujo sanguíneo ral ocurre un tipo de degeneración axonal lenta, que
se caracteriza por afectar primero los extremos de
de los nervios por la lesión angiopática.
las fibras largas y de manera evolutiva las zonas
b. Efectos metabólicos en la vía de los polioles y
proximales de éstas, lo que luego tiene repercusión
la glucosilación no enzimática de las proteínas
en las fibras más cortas. Este patrón de degenera-
del nervio. ción axonal distal, llamado también “muerte
reversa”

475
de las fibras nerviosas, es de causa metabólica, tóxi- 2. Tóxicas.
ca o hereditaria. La recuperación de la degeneración a. Metales pesados.
axonal necesita que el nervio se regenere, lo cual es • Arsénico.
un proceso lento. • Bismuto.
Por otro lado, la desmielinización de un nervio • Plomo.
periférico, aunque ocurra exclusivamente en un solo • Mercurio.
sitio, se traduce en un bloqueo de la conducción, • Talio.
con la producción de un cuadro funcional similar al b. Venenos orgánicos.
descrito para la degeneración axonal lenta, pero a • Triortocresilfosfato.
diferencia de ésta, su reparación, en este caso • Tricloroetileno.
remielinización, puede ser más rápida. Este patrón • Benceno.
de desmielinización acontece en los casos de neuro- • Alcohol metílico.
patías inflamatorias desmielinizantes, en algunas • Bisulfuro de carbono.
neuropatías asociadas con paraproteinemias en las c. Medicamentos.
que hay un ataque inmunológico a la vaina de mielina • Antivirales.
y en los trastornos hereditarios de mielina. • Citostáticos: cisplatino, vincristina, vinblas-
Como quiera que ambos patrones de daño produ- tina.
cen igual cuadro clínico, se comprenderá que sólo • Antibióticos: cloranfenicol, nitrofurantoí-
atendiendo a las características clínicas es imposible na, dapsone.
determinar si se trata de un patrón de lesión nerviosa • Tuberculostáticos: etambutol, isoniacida.
periférica con predominio axonal o desmielinizante, • Otros: piridoxina, hidralazina, penicilami-
por lo que es necesario apoyarse en las pruebas na, sales de oro, etc.
electrodiagnósticas, la velocidad de conducción ner- 3. Endocrinometabólicas.
viosa y la electromiografía para aclarar la situación. • Diabetes mellitus.
En términos generales, la degeneración axonal dis- • Acromegalia.
minuye la amplitud del potencial de acción evocado • Porfiria.
fuera de proporción con el grado de reducción en la • Uremia.
velocidad de conducción, mientras que la pérdida • Amiloidosis.
de mielina ocasiona descensos importantes en la • Neuropatía de cuidados intensivos.
velocidad de conducción. 4. Deficitarias.
• Beriberi.
Clasificación • Pelagra.
De acuerdo con su causa, las polineuropatías se cla- • Anemia perniciosa.
sifican en: • Embarazo.
• Alcoholismo.
1. Infecciosas. • Malabsorción.
a. Virus. 5. Inmunoalérgicas y por conectivopatías.
• Herpes zóster. • Guillian-Barré-Strohl.
• Gripe. • Polineuropatía inflamatoria desmielinizante
• Mononucleosis infecciosa. crónica.
b. Rickettsias. • Neuropatía multifocal motora.
• Tifus exantemático. • Enfermedad del suero.
c. Bacterias. • Polimiositis.
• Lepra. • Artritis reumatoidea.
• Difteria. • Lupus eritematoso diseminado.
• Leptospirosis. • Poliarteritis nudosa.
• Sífilis. • Esclerodermia.
• Fiebre tifoidea. 6. Vasculares.
• Disentería bacilar. • Arteriosclerosis.
• Tuberculosis pulmonar. • Tromboangeítis obliterante.
476
7. Heredofamiliares. bién sucede lo contrario, como ocurre en la intoxi-
• Déjerine-Sottas. cación por plomo y en la polineuropatía producida
• Charcot-Marie-Tooth. por la isoniacida. Los reflejos se encuentran prime-
• Refsun. ro exaltados y luego disminuidos o abolidos.
• Riley-Day. Suelen presentarse múltiples trastornos tróficos;
• Friedreich. así, en la fase irritativa a veces se observa
• Hicks. hiperemia cutánea, sudoración y cianosis, y en la
• Denny Brown. deficitaria, atrofias musculares, osteoporosis,
artropatías pos- turales neurotróficas, piel brillante
Cuadro clínico y lisa, frialdad, alopecia zonal, trastornos tróficos
El cuadro clínico de una polineuropatía depende de de las uñas, úlce- ras (mal perforante plantar),
incontinencia urinaria, impotencia sexual, etc.
su causa y de los nervios afectados, pero de un
Las polineuropatías adoptan una forma motora
modo general la afección presenta una fase de
predominante, como en la porfiria, el saturnismo y
irritación de los nervios lesionados, que luego pasa
la difteria, o preferentemente sensitiva, como en la
a otra de agotamiento o deficitaria. En la práctica
polineuropatía alcohólica, arsenical y lepromatosa.
se le en- cuentra con mayor frecuencia en la fase
En estas últimas por lo común prevalece la toma de
deficitaria y se argumenta que esto se debe a lo la sensibilidad superficial sobre la profunda
breve de la fase irritativa y que por lo general el (amiloidosis, intoxicación por triortocresil fosfato)
enfermo no acude al médico ante los primeros o todo lo contrario (arsénico).
síntomas, ya que estos son habitualmente vagos y Evolucionan en forma aguda o crónica; la forma
sólo comienza a preocu- parse cuando se presenta la aguda puede ser progresiva o regresiva, y la cróni-
fase deficitaria. Así, el cuadro clínico dependerá del ca, progresiva o recidivante.
nervio dañado y su lo- calización anatómica. Dado que las polineuropatías tienen característi-
Los síntomas esquematizan del modo siguiente: cas específicas según la causa que las produzca, se
1. Sensitivos. explicarán en particular algunas de las más
a. Fase irritativa: frecuen- tes e importantes.
• Algias.
• Hiperestesia cutánea.
• Parestesias.
• Dolor a la compresión de los troncos ner-
SÍNDROME
viosos. DE GUILLAIN-BARRÉ-
b. Fase deficitaria:
• Hipoestesia. STROHL
• Anestesia.
2. Motores. Es un cuadro descrito por estos autores en 1916,
a. Fase irritativa: que está incluido dentro de las polineuropatías
• Calambres. inflama- torias agudas y casi seguro que sea un
• Contracciones fibrilares. trastorno mediado por mecanismos inmunológicos.
• Espasmos tónicos. El síndro- me afecta a personas de cualquier edad,
b. Fase deficitaria: sexo y raza, aunque algunos autores han reportado
• Paresias. una inciden- cia mayor entre la tercera y cuarta
• Parálisis. décadas de la vida, así como un ligero predominio
• Hipotonía y atrofias musculares. por el sexo fe- menino y la raza blanca.

Los síntomas motores son por lo general más


Sinonimia
distales que proximales, pero en algunos casos pre- La afección ha recibido múltiples nombres, tales
dominan en las regiones proximales. Casi siempre como polineuritis aguda infecciosa, parálisis aguda
se afectan más los miembros inferiores, aunque tam- ascendente, polineurorradiculoganglioneuronitis,
477
polineuritis aguda idiopática, polineuritis con El examen físico del sistema nervioso muestra
diplejía facial, etc. un déficit motor como elemento característico de
la enfermedad, el cual consiste en una parálisis de
Etiología tipo fláccido, de intensidad variable, que va desde
En casi las ¾ partes de los casos de síndrome de una ligera disminución en la fuerza de contracción
Guillain-Barré-Strohl, se encuentra como anteceden- muscu- lar, hasta una parálisis total del músculo o
te previo un proceso agudo febril, de duración e in- grupos musculares.
tensidad variables, que aparece entre 1 y 3 semanas Hay hipotonía de mayor o menor intensidad, así
antes de que se inicie el cuadro neurológico, con como hiporreflexia o arreflexia osteotendinosa, se-
manifestaciones respiratorias, digestivas o ambas, y gún el grado de parálisis. Los reflejos cutáneos sue-
cuyas causas son múltiples en relación con: len estar presentes y el signo de Babinski o sus
sucedáneos son infrecuentes.
1. Virus: El examen de la sensibilidad comúnmente mues-
Herpes zóster ECHO 7 y 9 tra desproporción entre los trastornos subjetivos de
Herpes simple Hepatitis A y B la sensibilidad, a veces muy prominentes (dolor,
Epstein-Barr VIH parestesias) y las alteraciones objetivas, que por lo
Citomegálico Influenza general son escasas. Los trastornos subjetivos de la
Coxsackie A4 y B5 Sarampión sensibilidad persisten a veces durante meses
2. Bacterias: después de haberse logrado la recuperación
Campylobacter jejuni Salmonella motora. Las al- teraciones objetivas de la
Plasmodium falciparum Shigela sensibilidad consisten en hipoestesias e
Echerichia coli Mycoplasma pneu- hipoalgesia, aunque en ocasiones hay hiperestesia e
moniae hiperalgesia, o hipopalestesia.
3. Posinmunización: El examen de los pares craneales muestra con
Haemophilus influenzae Viruela Influenza fre- cuencia una parálisis facial periférica (la
Toxoide tetánico enferme- dad tiene predilección por este par
Rabia Toxoide tétanos- craneal). También pueden estar tomados los pares
difteria IX y X, lo cual se traduce por una parálisis
faringolaríngea. Si la afec- tación se extiende hasta
Así mismo, se ha demostrado un aumento en la la porción motora visceral del X par craneal,
tendencia a padecer el síndrome después del parto. aparecen signos de tipo vegetativo, que caracterizan
Una pequeña proporción de casos (menos del 5 %) a las formas graves: taquicardia, arritmia
ocurre entre 1 y 4 semanas después de un proceder respiratoria, hipoventilación, edema pulmo- nar, etc.
quirúrgico. Si el paciente no fallece, la lesión de los pares
craneales suele mostrar tendencia a la recupe-
Patogenia ración rápida y total.
El mecanismo a través del cual se produce la enfer- La enfermedad entra en etapa de progresión
medad es desconocido, a pesar de que hay eviden- cuan- do al cuadro inicial se suman nuevos
cias de gran peso que indican que el síndrome tiene síntomas o sig- nos, o se agravan los existentes.
un trasfondo autoinmune. Esta fase constituye el verdadero período de
actividad patogénica del proceso; dura entre 2
Cuadro clínico días y 3 semanas aproxima- damente, y se inicia
Los síntomas neurológicos iniciales son variables y después una etapa que tiene has- ta 6 semanas de
los pacientes se quejan de debilidad en los miem- duración, durante la cual se produce la regresión de
bros inferiores y dificultad para la marcha, acompa- los síntomas y signos.
ñada en algunos casos de dolor en las masas
musculares y en el raquis. Menos frecuentemente Formas clínicas
refieren como manifestaciones iniciales parestesias, Han sido descritas distintas variantes del síndrome
diplopia, cefalea, parálisis facial periférica o tras- de Guillain-Barré-Strohl, tales como:
tornos al deglutir. • Parálisis faringo-cérvico-braquial.
• Parálisis facial bilateral con parestesias e hi-
porreflexia.
478
• Polineuropatía lumbar bilateral. sión del líquido por lo general se encuentra dentro
• Síndrome de Miller-Fischer. de los límites normales.
• Polineuritis craneal. La punción lumbar no sólo debe realizarse de
• Parálisis ascendente de Landry. ini- cio, sino que ha de repetirse de manera seriada
cada 7 a 10 días, para de esta manera confirmar las
La parálisis ascendente de Landry se presenta varia- ciones de las proteínas en el líquido en la
cuando la parálisis asciende y afecta, además de los fase de progresión y de regresión de la enfermedad.
miembros inferiores, el tronco, los miembros supe- En esta última fase las proteínas permanecen, en
riores y la cara. Es, a la vez que una forma clínica, ocasiones, elevadas durante meses.
una complicación grave capaz de dar al traste con la Algunos autores han señalado alteraciones del
vida del paciente por parálisis respiratoria secunda- ECG en ciertos casos, especialmente del segmento
ria al daño de los núcleos bulbares. ST y de la onda T, por lo cual se realizará a diario
Los signos que orientan hacia la existencia de en los casos graves e inestables en su aparato
compromiso respiratorio son los siguientes: cardio- vascular.
Exámenes inmunológicos. En los primeros estu-
1. Ansiedad e intranquilidad.
dios evolutivos se detectan títulos elevados de un
2. Tos débil con expectoración dificultosa.
anticuerpo IgM antimielina que fija el complemen-
3. Dificultad para contar en alta voz durante la
to, cuya disminución se relaciona con la mejoría
fase espiratoria después de una inspiración for-
clí- nica. También se encuentran anticuerpos IgM e
zada. Normalmente debe llegarse hasta 20 o
IgG contra GM1 y GD16, que son
más. Si el paciente no pasa de 15, se calcula
glicoproteínas de membrana en pacientes con
que la capacidad vital ha disminuido en un 25 %
evidencia de infección por Campylobacter, lo que
de lo normal.
sugiere semejanza entre antígenos del nervio y la
4. Trastornos de conciencia.
bacteria.
Exámenes complementarios Se han descrito linfocitos activados circulantes,
y en cultivos celulares, linfocitos que se activan,
Hemograma. Generalmente hay leucocitosis, aun- pro- liferan y producen linfocinas.
que poco intensa.
Eritrosedimentación. Se encuentra acelerada. Diagnóstico
Líquido cefalorraquídeo. Su examen es funda-
Se hace mediante el cuadro clínico antes descrito,
mental para confirmar el diagnóstico, pero no
apoyado en los exámenes complementarios indi-
debe olvidarse que su resultado depende del cados.
tiempo de evolución de la enfermedad. Por lo A fin de facilitar las cosas, se ha realizado una
general se en- cuentra una disociación albumino- escala funcional del síndrome:
citológica, es de- cir, aumento de las proteínas y
células normales o ligeramente elevadas (entre Grado 0- Individuo sin enfermedad.
10 y 20 células/mm3). El conteo diferencial Grado 1- Paciente con síntomas y signos me-
muestra linfocitos y elemen- nores.
tos mononucleares. Grado 2- El enfermo puede andar hasta 5 m sin
En el estudio electroforético del líquido, se halla ayuda, andador o bastón, pero es inca-
casi siempre elevación de las gammaglobulinas con paz de hacer trabajos manuales.
disminución de la fracción beta. Grado 3- Puede andar hasta 5 m con ayuda,
La hiperproteinoraquia se ha tratado de explicar anda- dor o bastón.
sobre la base del edema que afecta las raíces, que es Grado 4- El paciente se encuentra postrado.
particularmente severo en el sitio donde éstas atra- Grado 5- Requiere ventilación asistida, parte del
viesan las vainas durales, por lo cual se ha plantea- día o de la noche.
do un mecanismo de trasudación plasmática o una
falta de reabsorción del LCR. En estos enfermos se Evolución y pronóstico
han demostrado niveles proteicos mucho más bajos En la mayoría de los casos la enfermedad evolucio-
en el LCR obtenido por punción cisternal. La pre- na en forma favorable y se produce la curación. En
479
algunos pacientes se presenta una parálisis ascen- • Vitaminoterapia en altas dosis por sus efectos
dente de Landry, capaz de ocasionar la muerte por metabólicos favorables. Se indicará:
insuficiencia respiratoria. Vitamina B1, 100 a 300 mg/día.
En los que tienen una evolución favorable, des- Vitamina B6, 100 a 300 mg/día.
pués del período de progresión aparece el de estabi- Vitamina B12, 1 000 a 2 000 mcg/día.
lización, casi nunca mayor de una semana. A este
período le sigue un cuarto y último, llamado de re- Medidas específicas
cuperación, de duración variable y que puede ex- • Betametasona. Se aplican 8 mg en días
tenderse por espacio de unos meses. De acuerdo con alternos, por vía intratecal, hasta completar un
la duración de esta última etapa, los pacientes con total de 8 a 10 dosis.
un síndrome de Guillain-Barré-Strohl se dividen en • Inmunoglobulinas. Se indican 0,4 g/kg de
tres grupos: peso/ día durante 5 días. Se cree que actúan
produ- ciendo una disminución de la acción
Grupo A- Los que muestran recuperación total en del com- plemento activado (C3a y C4a) en
un período no mayor de 2 meses. las células diana.
Grupo B- Los que muestran recuperación total en • Plasmaféresis. Se recomiendan recambios
un período promedio de 6 meses. de 200 ml/kg de peso corporal como recambio
Grupo C- Los que muestran recuperación total o total, lo que equivale a realizar 4 o 5 de 3,5
a 4 L cada uno en un período de tiempo entre
parcial en un período mayor de 6 meses.
1 y 2 semanas.
Tratamiento • Se hará énfasis en la atención al equilibrio aci-
dobásico e hidroelectrolítico.
Estos enfermos deben ser atendidos en una UCI hasta • Los casos complicados con insuficiencia respi-
que se mantengan libres de complicaciones que com- ratoria aguda requieren ventilación mecánica
prometan sus funciones vitales o hasta el inicio de adecuada y, si la intubación se prolonga, debe
la fase de recuperación. En el tratamiento se con- valorarse una traqueostomía.
templan medidas de orden general y otras más espe-
cíficas.

Medidas generales POLINEUROPATÍA


Incluyen las siguientes: INFLAMATORIA
• Reposo. Está en relación con el grado de pará-
lisis que tenga el paciente y siempre se deben DESMIELINIZANTE
evitar las posiciones viciosas.
• Dieta. Debe ser agradable al paladar y, si fuera
CRÓNICA
necesario, se valorará el uso de una sonda na-
sogástrica o alimentación parenteral. En 1975, Dyck y colaboradores reunieron bajo esta
• Cateterización de una vena profunda a fin de denominación entidades que en la literatura médica
garantizar la alimentación o para realizar cual- se describían como polineuritis corticodependien-
quier otro proceder. tes, polineuropatía desmielinizante subaguda
• Mantener las vías aéreas expeditas mediante corticosensible, síndrome de Guillain-Barré progre-
puñopercusión, aspiración endotraqueal, etc., sivo y síndrome de Guillain-Barré crónico.
a fin de evitar la neumonía hipostática y la ate- En la actualidad existen criterios de diagnóstico
lectasia. que se resumen a continuación:
• Sondaje vesical si fuera necesario.
• Movimientos articulares y ejercicios pasivos • Trastorno motor y sensitivo progresivo en más
como profilaxis del tromboembolismo pulmo- de una extremidad, de instauración en 2 o más
nar. Si se estima pertinente, se utiliza la heparina meses.
en dosis antiagregante. • Hiporreflexia o arreflexia osteotendinosa.
480
• Afectación de fibras sensitivas mielinizadas, de
calibre mayor que las amielínicas, con signos NEUROPATÍ
de mielinización y remielinización.
• Edema peri o endoneural, infiltrado de células
A DIABÉTICA
mononucleares y formación de “bulbos de ce-
bolla”. La diabetes mellitus es una causa frecuente de poli-
• Menos de 10 células/mm3 en el LCR. neuropatía. Esta complicación de la diabetes gene-
• Reacciones serológicas en el suero para VDRL ralmente es de instalación lenta, simétrica, casi
y VIH negativas. siempre de predominio distal; se inicia con dismi-
• Proteinorraquia elevada. nución de la sensibilidad en los pies y ocurre con
• Estudios neuroelectrofisiológicos caracterís- preferencia en diabéticos de largo tiempo de evolu-
ticos. ción.

El intervalo entre el comienzo y el déficit neuro- Patogenia


lógico máximo es de unos 6 meses o más, las fluc- Ha sido profundamente estudiada, pero aún no está
tuaciones son habituales y se ha notado asociación del todo aclarada. Es importante señalar que la inci-
con HLA, A1, B8 y DRw3. dencia y gravedad de la neuropatía diabética dismi-
El tratamiento por largo tiempo con corticoste- nuyen si se logra mantener los niveles de glicemia
roides logra remisiones prolongadas. lo más próximo posible a los valores normales, ya
que al parecer la hiperglicemia misma contribuye al
daño nervioso. Está claro que la aterosclerosis se ve
NEUROPATÍA MOTORA favorecida por la diabetes, sobre todo si no hay
buen control metabólico y ello se traduce en
MULTIFOCAL anormalida- des vasculares por lesión de los vasa
nervorum y las arteriolas, con la consiguiente
isquemia del nervio. Además, intervienen factores
Se trata de una neuropatía progresiva que puede te-
de tipo metabólico:
ner empeoramiento brusco, permanecer estaciona-
ria e incluso mejorar discretamente a lo largo de los • Los niveles de glucosa elevados ejercen un
años. No hay trastornos sensitivos o éstos son mí- efec- to osmótico que provoca acumulación de
nimos. agua en el interior de la célula nerviosa.
La fuerza muscular está muy disminuida y la atro- • Las anomalías en las vías de los polioles con
fia es marcada. Hay hiporreflexia o arreflexia os- acumulación de sorbitol y fructosa en los ner-
teotendinosa en las extremidades afectadas. Los vios, así como disminución de algunos siste-
calambres son frecuentes y se observan fascicula- mas enzimáticos necesarios para la síntesis de
ciones. ácidos grasos a partir de acetato. Tanto la de-
No existen signos de piramidalismo y es excep- presión en la síntesis de los lípidos a partir
cional la toma de pares craneales. de la glucosa, como la reducción en la síntesis
El LCR es normal. Con las pruebas neuroelectro- de ácidos grasos a partir del acetato, al igual
fisiológicas se detectan bloqueos de conducción que el aumento de la glucosa libre intracelular
focales sobre las fibras motoras. Se han observado a consecuencia de la hiperglicemia, producen
cifras altas de anticuerpos anti-GM1 y anti-aGM1, una mayor acumulación de sorbitol y fructosa
del tipo IgM. en los nervios del diabético.
El estudio histológico muestra desmielinización
segmentaria. Cuadro clínico
El examen clínico y el estudio neurofisiológico
La neuropatía diabética tiene dos formas de presen-
permiten diferenciar esta entidad de la esclerosis la-
tación: mononeuropatía y polineuropatía diabética.
teral amiotrófica de inicio espinal, lo cual es muy
importante, ya que con inmunoglobulina EV se lo-
Mononeuropatía diabética
gra a veces la remisión del cuadro clínico de la neu-
La lesión nerviosa tiene traducción clínica sensiti-
ropatía, aunque por tiempo limitado.
va, motora o mixta. La mononeuropatía representa
481
la insuficiencia vascular o el infarto del nervio. De las sensaciones térmica, vibratoria y dolorosa
manera típica tiene un comienzo súbito y en muchas super- ficial. A menudo la disfunción de las fibras
oportunidades doloroso, va seguida de una evolu- peque- ñas se traduce por dolor neuropático
ción rápida, en picos y por saltos, con una regresión espontáneo, que incluye molestas disestesias
total en un período de tiempo que oscila entre varias consistentes en sensa- ciones desagradables
semanas y algunos meses. El dolor y la parálisis son desencadenadas por estímulos inocuos, como el
los síntomas más importantes. Los nervios que con roce de las sábanas con los dedos de los pies. Es
mayor frecuencia se afectan son: peroneo, ciático, posible que haya dolor pulsátil o urente continuo;
cubital, mediano, torácicos largos, III y VI pares con frecuencia la marcha es molesta y se producen
craneales y en menor cuantía el II y VII pares cra- dolores fulgurantes en piernas y pies. Por lo común
neales. La toma del III par se manifiesta por una hay trastornos funcionales del sistema ner- vioso
oftalmoplejía e imposibilidad para abrir el párpado, autónomo, como enfriamiento exagerado ante la
pero se respeta la pupila, ya que las fibras del nervio exposición al frío, disminución de la sudoración,
que a ella corresponden se encuentran en la peri- cambios tróficos en pies y uñas, hipotensión ortos-
feria. tática, impotencia sexual y la diarrea diabética.
Otra forma clínica de la mononeuropatía diabéti-
ca es la plexopatía lumbosacra, la cual se presenta
con dolor en la cadera y debilidad de los músculos NEUROPATÍA
proximales de la pierna, que se desarrolla a lo largo
de días o semanas. La exploración cuidadosa mues- ASOCIADA AL VIH
tra compromiso de los músculos que inerva el plexo
lumbosacro, incluyendo los músculos del hueco En el curso de la infección por VIH es frecuente la
poplíteo y los glúteos. Los escasos datos patológi- presentación de la neuropatía sensitiva del SIDA,
cos que existen, sugieren que este cuadro es conse- entidad cuya patogenia es desconocida, pero que no
cuencia de la enfermedad de los pequeños vasos del parece sea consecuencia de la infección local por
plexo lumbosacro, amplificados por la arterosclerosis VIH dentro de los nervios mismos. Es típico que el
concomitante en la bifurcación aórtica. paciente aqueje dolor plantar y molestias a la mar-
Por último, otra variante de mononeuropatía dia- cha. El dolor neuropático es de intensidad variable,
bética es la llamada neuropatía diabética “truncal”, puede llegar a ser muy severo y se asocia con lesio-
en la cual los pacientes aquejan dolor en la distribu- nes de las fibras pequeñas y grandes; el daño motor
ción de uno o más nervios intercostales, a menudo que se produce es de grado variable, aunque por re-
asociado con hiperestesia y entumecimiento. Tanto gla general tiene poca magnitud. El examen físico
en la plexopatía lumbosacra como la neuropatía dia- demuestra hiperreflexia patelar con pérdida de los
bética “truncal”, la regla es la recuperación después reflejos en los tobillos.
de varios meses. Los estudios anatomohistológicos de esta neuro-
patía demuestran degeneración axonal no inflama-
Polineuropatía diabética o neuropatía diabética si- toria, de predominio distal en las fibras sensitivas.
métrica Otras diversas enfermedades nerviosas, como el
Es la variedad más común de neuropatía diabética. síndrome de Guillain-Barré-Strohl y la neuropatía
En sus estadios iniciales generalmente es asintomá- periférica inflamatoria crónica, pueden presentarse
tica, pero ya las alteraciones en la sensibilidad y re- al comienzo de la infección por VIH y se piensa
flejos se detectan en la exploración rutinaria. La fase que traducen la disregulación inmunológica inicial.
sintomática tiene un inicio insidioso, evolución pro- En caso del SIDA, también a veces se asocia la
gresiva, distribución simétrica y toma la porción infección de un nervio por el citomegalovirus, ca-
distal de varios nervios periféricos. paz de ocasionar una mononeuropatía múltiple o
A diferencia de la mayoría de las otras neuropa- polirradiculopatía, trastorno grave caracterizado
tías, es típico que en la diabetes disminuya la sensi- por dolor súbito en la espalda y piernas con
bilidad de las fibras pequeñas por las cuales transitan paraparesia y arreflexia de progresión rápida. En el
LCR se en- cuentra pleocitosis con predominio de
polimorfonu-
482
cleares e hiperproteinoraquia, y en ocasiones se iden- de signo de Babinski y disfunción cerebelosa, y
tifican las inclusiones del citomegalovirus. que aparece como consecuencia de neoplasias
malignas. El cuadro neurológico puede presentarse
1 año o más antes de que el cáncer sea descubierto;
NEUROPATÍA de ahí la im- portancia de realizar un examen
clínico amplio y exhaustivo ante una
URÉMICA polineuropatía sensitivomotora subaguda, ya que
permite descubrir una neoplasia oculta que
generalmente se encuentra en el pulmón, las mamas
Está asociada a la insuficiencia renal crónica; se de- o los ovarios. Con menor frecuencia, otras
tectan alteraciones electrofisiológicas cuando la de- neoplasias producen este cuadro clínico.
puración de creatinina está por debajo del 10 % de La etiopatogenia de la afección es desconocida y
lo normal y es extremadamente frecuente en pacien- se ha atribuido a reacciones de tipo autoinmune,
tes que se encuentran en régimen de hemodiálisis o tóxi- cos secretados por el tumor, infecciones
diálisis peritoneal por largo tiempo. virales, de- fectos nutritivos, etc.
La patogenia no está bien definida, pero es pro- El cuadro clínico siempre es progresivo, pero re-
bable que se relacione con la retención de molécu- mite cuando se extirpa el tumor.
las tóxicas.
Casi siempre el síndrome se presenta como una
polineuropatía sensitiva y motora, simétrica y distal,
en la cual es posible encontrar predominio motor
POLINEUROPATÍ
traducido por debilidad de las piernas y pie péndu-
lo, o por el contrario, existe predominio sensitivo
A SATURNINA
traducido por parestesias y disestesias urentes. Al
examinar la reflectividad, es característica la pérdi- Se presenta como complicación de la intoxicación
da de reflejos tendinosos, que se inicia por el tobillo. por plomo, ya sea por ingestión o por inhalación de
vapores del metal. Se ve en campesinos que
utilizan insecticidas a base de sales de plomo
NEUROPATÍA DE (arseniato de plomo, por ejemplo) o en pintores
que no emplean medios adecuados de protección.
CUIDADOS INTENSIVOS También en niños que se llevan a la boca pintura de
la cuna o paredes y en trabajadores de fábricas de
acumuladores.
Con la aparición de las UCI se diagnostica, cada vez La polineuropatía saturnina es motora y
con mayor frecuencia, una variedad de neuropatía asimétri- ca, y comienza casi siempre por las
que se presenta en pacientes con sepsis, cuya esta- extremidades superiores con caída de la muñeca y
día en estas unidades es prolongada y en la cual pre- debilidad de los músculos extensores de los dedos.
domina el daño motor. La causa no está esclarecida
y parece que el mecanismo patogénico subyacente
Tratamiento de las polineuropatías
es la degeneración axonal. La mayoría de las perso- Está dirigido a lograr los siguientes objetivos.
nas se recuperan por completo. • Combatir el agente etiológico, si se conoce.
• Aplicación de medidas generales.
• Rehabilitación por medio de la fisioterapia.
POLINEUROPATÍA Para el logro de estos fines es necesario aplicar
CARCINOMATOSA las medidas que a continuación se exponen:
1. Supresión del agente causal, en cuyo caso la
Se caracteriza por un cuadro subagudo con toma conducta dependerá de la naturaleza de éste.
sensitiva distal importante y motora proximal, y 2. Reposo en cama con cambios posturales fre-
dolores lancinantes, que en ocasiones se acompaña cuentes, pero evitando posiciones viciosas a fin
de hacer profilaxis de la neumonía hipostática.
483
3. La dieta debe aportar las calorías necesarias y de visión progresiva y bilateral, dificultad para la
ser grata al paladar. En caso de dificultad para visión de colores y fotofobia. Con estos elementos
la deglución, se indicarán alimentos blandos o se hizo el diagnóstico de sospecha de neuritis
preferentemente líquidos, administrados por óptica retrobulbar y se concluyó, en aquel
sonda nasogástrica. Si es necesario, debe apli- momento, que se trataba de una neuritis tóxico-
carse alimentación parenteral. nutricional. Este cri- terio se basó en tres
4. Los analgésicos se emplean en caso de dolor, elementos encontrados en la mayoría de los casos
desde el ácido acetil-salicílico, en dosis de 2 estudiados hasta aquel período:
a 3 g/día, hasta los opiáceos de ser necesarios 1. Ingestión de alcohol.
(meperidina, 100 mg IM). No olvidar que es- 2. Hábito de fumar.
3. Déficit de vitamina B
.
tos últimos pueden producir adicción. 1

5. Vitaminoterapia: se recomienda el uso de ele- En el segundo semestre de 1992, este mismo


mentos del complejo B. cua- dro clínico comenzó a diagnosticarse en otras
Vitamina B1————— 100 a 200 mg/día. pro- vincias y en el segundo semestre de 1993,
Vitamina B6————— 25 a 50 mg/día. ya la epidemia se había extendido a todo el país y
Vitamina B12———— 1 000 mcg/día. se ha- bía notado un incremento de la forma
Ácido nicotínico——— 150 mg/día. periférica. A partir del segundo semestre de 1993,
Se aconseja, además, el aporte de vitamina A tanto la forma óptica como la periférica
en dosis de 50 000 a 100 000 U/día y Vitamina descendieron.
C en dosis de 0,5 g/día. La enfermedad era excepcional en niños y ancia-
La terapéutica vitamínica debe iniciarse por vía nos. La forma óptica mostró predominio en los
parenteral y, posteriormente, cuando el paciente hom- bres fumadores mayores de 35 años y fue
entre en período de estabilización, pasarse a la más grave en los que, además de fumar, ingerían
vía oral. bebidas alco- hólicas. La forma periférica
6. Cuidados de la vía aéreas: éstas se mantendrán predominó en mujeres. Formas clínicas
expeditas mediante aspiración por intubación La neuropatía epidémica presenta dos formas clí-
endotraqueal o por medio de una traqueostomía nicas:
si fuera necesario.
A. Forma óptica.
7. Fisioterapia: se debe iniciar precozmente, al
B. Forma periférica.
principio durante 15 min 2 veces al día; luego
se aumentan de forma progresiva el tiempo y
Forma óptica
la intensidad de los ejercicios de acuerdo con
la evolución del paciente. En los enfermos conSólo serán señalados algunos elementos, ya que
esta variedad clínica es de manejo del oftalmólogo
gran debilidad muscular, se comenzará con ejer-
cicios pasivos encaminados a evitar la atrofiamás que del internista.
por desuso, las contracturas musculares y la an- En ella hay disminución progresiva de la agude-
quilosis de la articulación. za visual, deterioro de la visión de colores y
escasas alteraciones en los reflejos pupilares y en
el fondo de ojo. Los pacientes acuden al médico
NEUROPATÍA fundamen- talmente por la disminución de la
agudeza visual, la que afecta tanto la visión de
EPIDÉMICA CUBANA cerca como la lejana; se intensifica entre 3 días y 1
mes de haber sido notada por el enfermo; es peor a
la luz del día y se acompa- ña de sensación de
Historia deslumbramiento.
A comienzos de la década de los 90, apareció en el El déficit visual se clasifica en leve, moderado y
occidente del país un cuadro clínico fundamental- severo. Un aspecto sobresaliente es que la afección
mente en mujeres, provenientes la mayoría de zo- óptica es bilateral, simétrica y que el déficit visual
nas tabacaleras, las cuales se quejaban de pérdida es peor mientras más tiempo de evolución tiene el
paciente.

484
En algunas oportunidades las manifestaciones 2. Alteraciones neurovegetativas: taquicardia,
ópticas se ven acompañadas de alteraciones neuro- frialdad, sudoración profusa de manos y
páticas periféricas con predominio sensitivo, hipoacu- pies.
sia y, en ocasiones, trastornos mielopáticos. 3. Otros: hipoacusia, ataxia, disfonía, irritabi-
lidad, disfagia, constipación, diarreas,
Forma periférica impo- tencia sexual, pérdida de peso
Como cualquier otra polineuropatía, esta forma clí- inexplicable, adinamia, fatiga y cansancio
nica se caracteriza por presentar síntomas sensiti- fácil.
vos y motores.
Los síntomas sensitivos irritativos están dados por Para realizar el diagnóstico, el paciente debe
parestesias, sensación de pinchazos y de adormeci- reunir 3 criterios mayores o 2 criterios mayores y 1
miento, etc., en las extremidades. El enfermo se queja menor. Dentro de los mayores siempre estarán pre-
además de otros síntomas, tales como: fatigabilidad sentes el número 1 y el 2. El diagnóstico debe estar
fácil ante pequeños esfuerzos, hipoacusia perceptiva, apoyado por los estudios de conducción nerviosa.
dificultad para la concentración, insomnio e irrita-
bilidad, así como déficit de memoria y desorienta- Clasificación
ción. La neuropatía epidémica cubana en su forma
En la esfera genitourinaria el paciente aqueja po- perifé- rica se ha clasificado en: ligera, moderada y
laquiuria, poliuria, nicturia y con alguna frecuencia severa. Forma ligera: En ella el paciente presenta:
se encuentra micción imperiosa; además, impoten- • Síntomas sensitivos irritativos: sensación de
cia y anorgasmia. hormigueo, calambres, ardentía, adormeci-
El examen físico demuestra dolor a la presión en miento y sensación de calor.
los trayectos nerviosos en la fase irrtativa y, ade- • Alteraciones de la sensibilidad: hipopalestesia
más, puede presentarse dolor mioarticular. e hipoestesia. Ambas alteraciones son
El examen de la sensibilidad muestra toma de ésta distales.
en “botas y guantes”, traducida por hipo o apalestesia • Alteraciones de la reflectividad: hiperreflexia
cuando se explora la sensibilidad profunda, e hipoes- bilateral patelar y aquiliana.
tesia o anestesia al analizar la sensibilidad superfi- • Cualquiera de los criterios diagnósticos meno-
cial. res antes expuestos, menos los que reflejan par-
Las alteraciones de la marcha se ven con alguna
ticipación de pares craneales (hipoacusia,
frecuencia.
disfagia, disfonía), ataxia ni impotencia sexual.
Criterios diagnósticos Forma moderada: En ella el enfermo
presenta:
Los criterios para el diagnóstico han sido divididos • Síntomas sensitivos irritativos: los mismos de
en dos grupos:
la forma ligera.
A. Criterios mayores. • Alteraciones de la sensibilidad: las mismas de
1. Síntomas sensitivos irritativos: hormigueo,
la forma ligera.
parestesias, adormecimiento, sensación de
• Alteraciones de la reflectividad: hiporreflexia
calor y otros.
o arreflexia aquiliana bilateral, con hiperre-
2. Alteraciones de la sensibilidad: hipopaleste-
flexia rotuliana o sin ella.
sia o apalestesia acompañada de hipoestesia
o anestesia para la sensibilidad superficial. • Cualquiera de los criterios diagnósticos meno-
3. Alteraciones de la reflectividad: aumento o res antes expuestos, menos ataxia ni aquellos
disminución bilateral de los reflejos patelar que reflejan la participación de los pares cra-
y aquiliano. neales (hipoacusia, disfagia, disfonía) ni
B. Criterios menores. impo- tencia sexual.
1. Alteraciones de la micción: poliuria, pola- Forma severa: En ella el paciente presenta:
quiuria, nicturia, urgencia miccional, incon- • Síntomas sensitivos irritativos: los mismos que
tinencia urinaria. en la forma moderada.
• Alteraciones de la sensibilidad: las mismas
que en la forma moderada.
• Alteraciones de la reflectividad: las mismas
que en la forma moderada.
485
• Cualquiera de los criterios diagnósticos meno- • Caso ligero o moderado.
res, incluyendo la toma de pares craneales, • Caso severo.
ataxia, o cualquier otro trastorno de la marcha,
disminución marcada de la fuerza muscular e Caso presuntivo: Se administran los medicamen-
impotencia sexual. tos de la siguiente forma:
Neovitamín: 2 tabletas 3 veces al día durante 10
Tratamiento días y se continúa con una dosis de manteni-
En el tratamiento interesan tres aspectos: miento que es variable, según las necesidades
1. Tratamiento profiláctico. y acorde con la respuesta del paciente. Esta
2. Tratamiento rehabilitador. do- sis de mantenimiento se administra por 3
meses. Vitamina B12 (100mcg): 1 ml IM
3. Tratamiento curativo.
semanal du- rante 4 semanas y se continúa con
Tratamiento profiláctico 1 ml IM men- sual por 3 meses.
Está encaminado a prevenir la aparición de la enfer-
Caso ligero o moderado. Se procede de la
medad y consiste en:
siguien- te forma:
• Suministrar suplementos vitamínicos a todo pa-
ciente que ingrese en cualquier centro hospita- Vitamina B (tiamina): 100 mg IM diarios du-1
lario o que consulte por cualquier causa, a fin rante 10 días y se continúa con 50 mg diarios
por vía oral. Esta dosis de mantenimiento se
de crear el hábito de su necesidad.
aplica por 3 meses.
• Suministrar el medicamento en hogares de an-
cianos y de impedidos físicos, círculos infanti- Vitamina B (piridoxina): 50 mg IM diarios du-
les, internados y seminternados, así como en 6
centros penitenciarios. rante 10 días y se continúa con 25 mg diarios
por vía oral, por 3 meses.
Tratamiento rehabilitador Vitamina B12 (cianocobalamina): 100 mcg IM
Está dividido en tres fases, cada una de las cuales semanal durante 1 mes y se continúa con 100
tiene objetivos bien definidos. mcg IM mensual por 6 meses.
Primera fase: Esta fase se logra a través de ma-
sajes y ejercicios libres sin cargas. Sus objetivos son Vitamina B2 (riboflavina): 2 tabletas de 50 mg
aliviar el dolor y las parestesias, recuperar la fuerza diarias durante 10 días y se continúa con 5 mg
muscular, activar la remielinización del nervio y brin- diarios por 3 meses.
dar apoyo psíquico al paciente. Nicotinamida: 1 tableta de 50 mg diaria
Segunda fase: Se mantienen los ejercicios y ma- duran- te 3 meses.
sajes cuya dosificación se hace sobre la base del re- Vitamina A: 2 tabletas de 25 000 U diarias
sultado obtenido en las pruebas indicadas y su por 10 días y se continúa con 1 tableta diaria
duración oscila entre 6 y 8 semanas. durante 1 mes para luego seguir con 1 tableta
Los objetivos incluyen los de la primera fase, pero 2 veces por semana durante 3 meses.
se hace énfasis en mejorar la coordinación e incre- Vitamina E: 50 mg diarios durante 10 días y
mentar la fuerza muscular. se continúa con 50 mg 2 veces por semana
Tercera fase: Se logra aplicando ejercicios para por 3 meses.
el acondicionamiento físico general y específicos Ácido fólico: 1 mg diario durante 3 meses. Se
para las partes afectadas, con énfasis en la coordina- evalúa la respuesta al cabo de ese tiempo y se
ción y la fuerza muscular. Se incorporan, además, decide la conducta que se debe seguir.
ejercicios para la movilidad articular.
Caso severo: El esquema es similar al anterior,
Tratamiento curativo con la variante de que la vitamina B12 se administra
El tratamiento se enfoca según se trate de: en dosis de 1 000 mcg IM diarios durante 2 sema-
• Caso presuntivo. nas, se continúa con 1 000 mcg IM 2 veces por
semana hasta 3 meses y posteriormente se sigue
con 100 mcg IM durante 6 meses.
486
50
EPILEPSIA
Concepto prematuridad, traumatismos obstétricos, hemorragia
cerebromeníngea, enfermedad hemolítica y anoxia
Se denomina crisis o ataque epiléptico al cuadro
fetal.
electroclínico resultante de las descargas excesivas,
Infecciosas. Encefalitis, meningitis, absceso ce-
hipersincrónicas, súbitas y recurrentes de una po-
rebral y neurosífilis (muy importante en el niño).
blación neuronal más o menos extensa del cerebro.
Vasculares. Son especialmente frecuentes en el
Todo cerebro humano es capaz de dar lugar a crisis
adulto: hemorragia e infarto cerebral, arteritis de las
convulsivas si se le estimula adecuadamente, pero
enfermedades del colágeno y afines, y sobre todo
sólo debe hablarse de ataque epiléptico cuando se
las malformaciones vasculares (aneurismas, fístulas
demuestra la existencia de alteraciones electroen-
cefalográficas que traducen la descarga hipersincró- arteriovenosas).
nica excesiva neuronal; estas crisis son recurrentes. Metabólicas. Hipoglicemia, hipocalcemia, déficit
Así delimitada, la epilepsia constituye la segunda de piridoxina,
causa de afectación neurológica, superada sólo por Tóxicas. Alcoholismo (frecuente en el síndrome
los accidentes vasculares encefálicos. Se ha calcu- de supresión), saturnismo, intoxicación por
lado que el 0,5 % de la población la padece y que monóxi- do de carbono y uremia.
el 10 % posee una disposición funcional a presen- Tumorales. El 10 % de los tumores cerebrales
tarla. co- mienza con una crisis epiléptica y aquellos
Con frecuencia es de causa desconocida y aun- que se desarrollan en la proximidad de la corteza, la
que su expresión más dramática la constituye la cri- produ- cen con mayor facilidad.
sis convulsiva, hay muchas formas clínicas sin Procesos abiotróficos. Esclerosis tuberosa, enfer-
convulsiones. medad de Alzheimer y Pick, esclerosis múltiple,
etc. En la mayoría de los casos la encuesta
Etiología etiológica resulta negativa y los diversos exámenes
Las causas de los ataques epilépticos son de la más de investi- gación neurológica no encuentran una
variada naturaleza y pueden ser: causa, aun- que se supone cada vez con más
Traumáticas. Un traumatismo craneoencefálico fuerza, que el enfermo es portador de lesiones
reciente es capaz de ocasionar una crisis convulsiva cerebrales que se producen durante la vida
porque haya causado un hematoma extradural o intrauterina en partes inmaduras, áreas silentes,
subdural, lo cual no constituye una verdadera epi- etc., que con el desarrollo y la madurez del
lepsia; pero si produce una cicatriz cerebromeníngea, sistema nervioso se manifiestan como una
ésta sí suele ser motivo de un foco epileptógeno. Se epilepsia clasificada como idiopática,
ha calculado que un 0,5 % de las conmociones ce- criptogenética o esencial.
rebrales y un 20 % de las contusiones son causa de
epilepsia, cuyas manifestaciones clínicas aparecen Formas clínicas
entre 6 meses y 3 años después de producido el y electroencefalográficas
trau- matismo.
La exploración electroencefalográfica de los enfer-
Perinatales. Exposición a radiaciones de la em-
mos epilépticos ha evidenciado la existencia de dos
barazada, carencias vitamínicas e infecciones virales
durante la gestación (rubéola), toxemia gravídica, grupos fundamentales de crisis: generalizadas y
par- ciales o localizadas.

487
En 1981, la Comisión de Clasificación y Termi- 3. Crisis parcial simple que evoluciona a
nología de la Liga Internacional contra la Apilepsia crisis parcial compleja que se generaliza.
(ILAE), estableció la siguiente clasificación de las II. Crisis generalizada.
crisis epilépticas: a) Crisis de ausencia (típica).
• Alteración de la conciencia únicamente.
I. Crisis parcial (focal o local).
• Con componentes clínicos leves.
a) Crisis parcial simple (sin alteración de la con-
• Con componentes atónicos.
ciencia).
• Con componentes tónicos.
1. Con síntomas motores.
• Con automatismos.
• Focal motora con marcha (jacksoniana).
• Con componentes autonómicos.
• Focal motora sin marcha.
b) Ausencia atípica.
• Versiva.
• Postural. • Con cambios en el tono.
• Fonatoria (vocalización o detención del • De comienzo y terminación poco bruscos.
lenguaje). c) Crisis mioclónica.
2. Con síntomas sensitivos o sensoriales. • De sacudida única.
• Somatosensitiva. • De sacudida múltiple.
• Visual. d) Crisis atónica.
• Auditiva. e) Crisis tonicoclónica (Gran mal).
• Olfatoria. f) Crisis clónica.
• Gustativa. g) Crisis tónica.
• Vertiginosa. III. Crisis epilépticas no clasificadas.
3. Con síntomas vegetativos.
• Incluye sensación epigástrica, palidez, El mismo Comité de Clasificación y Terminolo-
sudoración, rubor, piloerección y dila- gía de la ILAE propuso la siguiente clasificación de
tación pupilar. las epilepsias:
4. Con síntomas psíquicos.
• Perturbación de las funciones cerebra- I. Epilepsias localizadas.
les superiores. a) Idiopática (relacionada con la edad).
• Disfásica. • Epilepsia benigna de la infancia con
• Dismnésica (dejá vu). “espi- gas” centrotemporales.
• Cognitiva (estado de ensueño). • Epilepsia benigna de la infancia con pa-
• Afectiva (miedo, ira). roxismos occipitales.
• Ilusiones (macropsia). b) Sintomáticas.
• Alucinaciones (música, escenas). • Con participación del sistema límbico.
b) Crisis parcial compleja. • Frontal.
1. De inicio parcial simple. • Temporal.
• Parcial simple seguida de trastornos • Central.
de conciencia. • Parietal.
• Con automatismos. • Occipital.
2. Con trastornos de conciencia desde el II. Epilepsias generalizadas.
comienzo. a) Idiopática (relacionada con la edad).
• Trastornos de conciencia solamente. • Convulsión benigna neonatal.
• Con automatismos. • Convulsión benigna neonatal familiar.
c) Crisis parcial que evoluciona hacia crisis • Síndrome de West (casos idiopáticos).
generalizada. • Epilepsias con ataques mioclónicos atóni-
1. Crisis parcial simple que evoluciona a cos (casos idiopáticos y familiares del
crisis generalizada. sín- drome de Lennox-Gastaut-Dravet).
2. Crisis parcial compleja que evoluciona • Epilepsia infantil con ausencias (picnoepi-
a crisis generalizada. lepsia).
488
• Epilepsia con ausencias mioclónicas o tónica. Ésta se caracteriza por la contracción pro-
clónicas. longada, tónica, de todos los grupos musculares del
• Epilepsia juvenil con ausencias. cuerpo, el cual adopta una postura característica: la
• Epilepsia mioclónica juvenil benigna. cabeza en extensión, los miembros superiores en
• Epilepsia con convulsiones tonicoclónicas flexión y aducción, el tronco en hiperextensión. La
del despertar. contracción de los músculos respiratorios provoca
b) Sintomáticas. apnea y ésta, a su vez, cianosis. La presión arterial
se eleva y hay trastornos en el ritmo cardíaco.
1. Causa no específica (relacionada con la
La fase tónica dura de 20 a 30 s, a veces menos,
edad).
rara vez más; se continúa con la fase clónica, en la
• Crisis neonatal.
que se inician movimientos bruscos y rápidos gene-
• Encefalopatía mioclónica temprana.
ralizados, que ganan amplitud rápidamente y luego
• Síndrome de West (espasmos infantiles,
van disminuyendo de intensidad y frecuencia hasta
Blitz-Nick-Salaam Krampfe).
terminar en 1 a 3 min. Si se observan los globos
• Sídrome de Lennox-Gastaut-Dravet.
oculares, se les verá animados de un movimiento
2. Causa específica.
rotatorio, con las pupilas midriáticas. Los
Epilepsia mioclónica progresiva.
movimien- tos respiratorios reaparecen y son
• Enfermedad de Lafora.
irregulares. Las contracciones agitan y ocasionan
• Enfermedad de Unverricht. protrusión de la lengua, por lo cual suele ser
• Enfermedad de Unverricht-Lundborg-
mordida. La tormenta neurovegetativa que de
Hartung.
forma paralela se ha produ- cido, provoca un
• Enfermedad de Kufs. marcado aumento de la secreción salival, que se
• Enfermedad de Zeman. tiñe de sangre y al ser expulsada por la boca
III. Epilepsia de origen indeterminado. entrecerrada, forma una espuma rosada típi- ca.
IV. Síndromes especiales. También en ese momento tiene lugar la emisión de
• Convulsiones febriles. orina, a veces de heces, más rara vez de semen. La
• Crisis relacionadas con problemas metabóli- llamada fase estertorosa sigue a continuación y
cos o tóxicos. con ella termina la crisis tonicoclónica, que en
general dura unos 10 min, o más. El enfermo yace
A continuación se describen los principales tipos hipotónico, habitualmente hay signo de Babinski
de crisis o ataques epilépticos, y posteriormente al- bilateral y persistencia de la midriasis de la etapa
gunas epilepsias que debe conocer el alumno de me- anterior. De manera gradual el paciente entra en un
dicina y el médico no especializado en la materia. estado de sueño profundo, que dura unos pocos mi-
Crisis generalizada nutos o varias horas, y del cual despierta un tanto
La descarga es captada simultáneamente por todos desorientado y aquejando cefalea gravativa y dolor
los electrodos exploradores. muscular. Además, no recuerda lo que le ocurrió,
hecho muy importante como elemento diagnóstico.
Crisis tonicoclónica (Gran mal) Después de una crisis tonicoclónica, y sobre todo
Esta crisis no se presenta en el lactante. En raras durante el estado de mal epiléptico, se puede
ocasiones, horas o días antes de producirse el ata- encon- trar leucocitosis con desviación izquierda,
que, el paciente aqueja malestar general, sensación hipergli- cemia y glucosuria, y en el LCR,
de lasitud, a veces de miedo, irritabilidad, molestias pleocitosis ligera
digestivas, etc. (nunca más de 200 células) e hiperalbuminorraquia.
El comienzo es súbito, brutal. El enfermo palide- En el electroencefalograma (EEG) hay una des-
ce, pierde el conocimiento y cae, los globos ocula- carga generalizada de entrada a toda la
res se desvían hacia arriba o hacia un lado. En este corteza, sincrónica, de igual amplitud, con una
momento puede emitir un grito agudo, a causa de la frecuencia de 10 ciclos durante la fase tónica,
inspiración o espiración brusca que precede a la fase con interrupción de ondas lentas durante la fase
clónica. Entre las cri- sis se observa un trazado
de polipuntas-ondas, o pun- tas y ondas, a veces
ondas agudas y ondas lentas.
489
Las crisis tonicoclónicas ocurren en la niñez y en traso mental. Responden poco al tratamiento anti-
la edad adulta. A veces se limitan en su expresión convulsivo.
clínica a una de sus fases o a una combinación de
ellas, de manera espontánea en enfermos de largo Crisis mioclónica
tiempo de evolución o bajo la acción de los medica- Se caracteriza por la aparición de bruscas sacudidas
mentos antiepilépticos. Otras veces todo queda re- musculares más o menos intensas o extensas, varia-
ducido a una crisis neurovegetativa: taquicardia, bles de un momento a otro del ataque y de un
hipertensión arterial, dolor abdominal, incontinen- enfer- mo a otro. Puede ser generalizada (mioclonia
cia de orina, sudoración, etc. masiva bilateral, sincrónica y más o menos
simétrica e inte- resar a toda la musculatura axial
Crisis de ausencia [rizomélica] y los músculos flexores, lo que provoca
Es de comienzo súbito y dura entre 5 y 15 s. El pa- una brusca flexión de la cabeza y de los brazos,
ciente palidece, no ve ni oye. Da la impresión de que son proyectados hacia adelante dejando
estar “fuera del mundo”. Se ha producido una sus- escapar a veces los objetos) o estar localizada en
pensión brusca de las funciones psíquicas, con abo- pequeños segmentos del cuer- po (mioclonia
lición de la conciencia. El enfermo interrumpe lo parcelaria) e interesar solamente a un miembro (el
que está realizando, los globos oculares suelen estar superior, con más frecuencia) o un músculo (el
animados de movimientos rítmicos o irregulares y orbicular de los párpados, por ejemplo). Las
la cabeza inclinada hacia adelante o hacia atrás; a mioclonias se caracterizan por su brevedad, ya que
veces hay parpadeo y contracciones de la comisura sólo duran centésimas de segundo, y por su
labial. Generalmente todos los movimientos obser- presentación espontánea o bajo el efecto de una
vados tienen una frecuencia de 3 ciclos/s. La crisis esti- mulación sensorial. Se agrupan en número de
termina de forma brusca y la persona reinicia su ac- 2o3
tividad donde la había suspendido, sin recordar nada en menos de un segundo.
de lo sucedido. En ocasiones el ataque es abortado El EEG de la crisis mioclónica se expresa por
al hablarle al enfermo, que casi siempre es un niño una descarga generalizada sincrónica y simétrica,
con dificultades en el aprendizaje escolar. con una frecuencia de 10 ciclos/s, con el aspecto de
En el EEG se registra una descarga generalizada polipun- tas o polipuntas-ondas.
y sincrónica peculiar, constituida por la asociación
de una punta aguda y una onda lenta a una frecuen- Crisis atónica o astática
cia de 3 ciclos/s durante la crisis; también es posible Se produce de forma brusca una disminución del
tono muscular, que puede ser segmentaria, en la
encontrar complejos de polipuntas-onda. En el pe-
cabeza, por ejemplo, y llevar ésta hacia adelante,
ríodo intercrisis se observa actividad de fondo
o en un miembro, o afectar todo el cuerpo y
normal y actividad de puntas o puntas-ondas inter-
provocar la caí- da al suelo (drop attack). La
caladas.
pérdida de la concien- cia es muy breve. El EEG
La ausencia típica no se asocia a otros problemas muestra descargas de punta-onda, seguida de
neurológicos, responde bien al tratamiento y en la ondas lentas que coinciden con la pérdida del tono
mayoría de las ocasiones desaparece en la adoles- muscular. En el período in- tercrisis se observa un
cencia; otras veces se asocia a crisis de Gran mal. patrón de polipunta-onda lenta intercalado en un
trazado no siempre normal, pues este ataque
Ausencia atípica ocurre en algunos síndromes epi- lépticos.
El comienzo es menos brusco y la pérdida de la con-
ciencia es más prolongada; son comunes los fenó- Crisis parcial (focal o local)
menos motores asociados. El patrón punta-onda del La descarga es captada sobre una región
EEG tiene una frecuencia de 2,5 ciclos/s o menos. determinada. Las crisis son menos frecuentes que
Se acompaña con frecuencia de anormalidades las generaliza- das, pero su estudio, tanto clínico
estructurales multifocales del cerebro, que se tradu- como electroen- cefalográfico, permite la
cen por signos de disfunción neurológica, como re- localización del foco epileptógeno. El
mecanismo básico es estructural,
anatomohistológico, no bioquímico. Permanecen lo-
calizadas o se generalizan de forma secundaria. A
490
su vez, las lesiones cerebrales que se producen du- raliza con pérdida de la conciencia, pero es impor-
rante los ataques generalizados, pueden “focalizar” tante tener en cuenta que esto último no ocurre al
una epilepsia. comienzo del ataque y que el enfermo recuerda el
Habitualmente las crisis parciales comienzan por aura, cuyo valor localizador es muy grande.
un síntoma (motor, sensitivo, sensorial, psíquico o La crisis somatomotriz, así como las otras varie-
neurovegetativo), que el enfermo percibe de mane- dades de crisis parciales, en raras ocasiones es des-
ra inmediata antes del ataque y que representa su encadenada por un estímulo sensorial o sensitivo
inicio. Se conoce con el nombre de aura y posee adecuado (epilepsia refleja).
gran valor localizador, pues se identifica con el foco
epileptógeno. Crisis somatosensitiva
El EEG registra un trazado parecido al de las cri- Consiste en la percepción súbita de sensaciones
sis generalizadas, pero limitado a un territorio más exteroceptivas, hormigueo, estremecimiento, frío,
o menos circunscrito de un hemisferio cerebral. calor, etc., con la misma localización y evolución
del ataque somatomotriz, al que en ocasiones
Crisis somatomotriz prece- de o acompaña. La zona epileptógena se
Es la más característica. La crisis convulsiva evolu- localiza en la circunvolución parietal ascendente.
ciona en tres fases: tónica, que dura algunos segun- Crisis visual. Cuando las manifestaciones clínicas
dos; clónica, de 1 a 2 min de duración, y resolutiva, consisten en la percepción de fosfenos, escotomas
muy breve.
y otras imágenes de naturaleza simple,
Con mucha frecuencia el miembro superior es el
corresponden a un foco epileptógeno del lóbulo
afectado y la flexión del pulgar y del índice de la
occipital; pero cuando las percepciones son
mano constituyen el aura. Luego los otros dedos se
complejas (objetos, personas, etc.), la región que
flexionan y con posterioridad la mano y el antebra-
descarga es parieto- temporoccipital.
zo se colocan en pronación, y el brazo en aducción
y retroposición. La fase tónica pronto se ve sustitui- Crisis auditiva. Al igual que las crisis visuales,
da por contracciones clónicas que desaparecen en los síntomas consisten en percepción de ruidos ás-
pocos minutos. La fase resolutiva se caracteriza por peros (acufenos), sonidos altamente integrados (me-
una parálisis o paresia del miembro, que por lo ge- lodía musical) o disminución o falta de audición.
neral desaparece con rapidez, pero que en ocasiones Crisis olfativa, gustativa y vertiginosa. Sus nom-
persiste horas o días. bres se definen por su expresión clínica. Casi siem-
En la crisis somatomotriz que ocurre en la cara, pre son auras de ataques más complejos.
el aura está representada por la desviación de la boca Crisis versiva. Consiste en el desplazamiento
hacia un lado; seguidamente hay un pestañeo enér- con- jugado de la cabeza, los ojos y el tronco
gico y movimientos clónicos de los ojos y la cabeza hacia el lado opuesto del foco que descarga; con
hacia el lado contrario del foco hemisférico que des- frecuencia se asocia una elevación del brazo y la
carga. Al final suele quedar una parálisis facial cen- pierna contra- laterales, y pocas veces
tral residual, que cede en pocas horas. La variedad homolaterales.
más rara de ataque somatomotriz es la forma crural, El foco epileptógeno por lo común está ubicado
que interesa de inicio al dedo grueso y se extiende en el lóbulo frontal y ocasionalmente en el tempo-
luego al pie y tobillo, los que adoptan una hiperex- ral. Las crisis tienen una gran tendencia a generali-
tensión que pronto alcanza a todo el miembro in- zarse.
ferior.
Cualquiera que sea el tipo topográfico, la crisis Crisis parcial o compleja
evoluciona de forma variable. O bien permanece lo- Se caracteriza por una actividad paroxística focal
calizada e indica que el foco epileptógeno está en la
acompañada de perturbación transitoria de la capa-
porción alta o baja de la circunvolución frontal as-
cidad de mantener el contacto normal con el medio
cendente si es braquial o facial, respectivamente; o
que rodea al enfermo, el que, por tanto, es incapaz
en el lóbulo paracentral si es crural; o se extiende al
de responder u obedecer a estímulos auditivos o vi-
hemicuerpo (crisis de Bravais-Jackson); o se gene-
suales durante los ataques; tampoco es capaz de
per- catarse de ellos.
491
Generalmente la crisis parcial compleja comien- de una habitación, comenzar a caminar (dromoma-
za por un aura, que es estereotipada para el pacien- nía), etc. Durante la crisis psicomotriz el paciente
te, seguida de una detención súbita de la actividad adopta en ocasiones una conducta histeriforme y
que realizaba en ese instante, con inmovilidad y presenta trastornos psíquicos transitorios o prolon-
mirada fija. gados, a veces indistinguibles de una equizofrenia
La crisis parcial compleja comprende entre sus paranoide. Es capaz, incluso, de cometer actos cri-
manifestaciones a la crisis psicomotriz, que es de minales.
observación muy frecuente. Se origina en las por- Los trastornos paroxísticos del lenguaje constitu-
ciones superficiales o en las profundas (sistema yen una forma de expresión de la crisis parcial
límbico) del lóbulo temporal y se generaliza con fa- com- pleja. La afasia es compleja o discreta
cilidad. Las alucinaciones auditivas son muy carac- (cuando el foco que descarga está en el hemisferio
terísticas y consisten en la percepción de zumbidos, dominante, región temporofrontoparietal inferior).
ruidos, silbidos, palabras, voces, tema musical, etc. A punto de partida de un foco temporal profun-
Las llamadas crisis uncinadas se observan sobre do, se producen en ocasiones paroxismos
todo en caso de tumores o abscesos temporales y vegetativos similares a los descritos en el gran mal,
consisten en la percepción de sabores desagradables que muchos autores consideran como exclusivos
y olores nauseabundos (a materia orgánica putrefac- de la crisis psi- comotora, a veces matizados por
ta, petróleo). Con reiteración se asocian a movimien- síntomas de la es- fera psicosexual (erección,
tos de chupeteo de los labios y la lengua y de orgasmo, eyaculación, etc.). El EEG intercrisis es
masticación. frecuentemente normal o muestra descargas de
Las alucinaciones visuales son siempre comple- puntas y durante el ataque no tiene valor
jas y elaboradas: el enfermo cree ver una pintura o localizador, ya que el foco epileptógeno en la crisis
espectáculo, todo con profusión de colores. A veces parcial compleja está situado en la por- ción
reconoce una escena de su pasado. Las personas u medial del lóbulo temporal o en el lóbulo fron- tal
objetos parecen proporcionados y bien formados o, en su porción inferior. Sólo electrodos especiales
por el contrario, deformes y sin guardar las propor- esfenoidales o intracraneales detectan tales focos.
ciones debidas.
Todas las crisis alucinatorias son paroxísticas, Estado de mal epiléptico
duran pocos segundos y se acompañan de una sen- Constituye una urgencia médica, pues implica un
sación afectiva particular: miedo, angustia, bienes- serio peligro para la vida del enfermo y para la
tar, atmósfera paradisíaca (estado de ensueño), inte- gridad anatómica de su sistema nervioso, ya
impresión de extrañeza o desconocimiento de situa- que la repetición de las descargas de manera
ciones familiares al enfermo (jamais vu) o, por el subintrante ocasiona hipoxia cerebral por isquemia
contrario, impresión de familiaridad y conocimien- y llega a pro- ducir la muerte de las neuronas. No
to de lugares o situaciones extrañas (déja vu, déja se conocen los mecanismos íntimos que originan
vecu). esta situación, que ocurre de forma espontánea, o
En todas las circunstancias mencionadas, que el por el abandono del tratamiento o la disminución
paciente reconoce como síntomas de su enfermedad, de los medicamentos muy rápidamente; también
conserva la conciencia; pero las crisis temporales se por trastornos metabóli- cos, toxicidad
acompañan en ocasiones de una toma particular de medicamentosa, infección del SNC, tumores
la conciencia: el automatismo, que presenta una con- cerebrales, traumatismo craneoencefálico y
ducta automática e involuntaria y dura desde varios epilepsia refractaria.
minutos hasta 1 h; durante ese tiempo, el enfermo Cualquiera de las variedades de crisis descritas
parece que no ve ni oye nada de lo que le rodea y puede dar lugar a un estado de mal epiléptico
frecuentemente realiza actividades o gestos, como (EME), que clínicamente se manifiesta por la
repetir una frase estereotipada incomprensible, lle- repetición rá- pida de las crisis, sin fase de
varse la mano a la frente, abotonarse y desabotonar- recuperación entre ellas. El más dramático y
se la ropa, estrujar un papel, etc. La actividad puede frecuente es el estado de Gran mal, en el cual las
ser más compleja, como poner orden en los muebles crisis varían entre 1 y 10/h, hay un estado de coma
profundo con fiebre, taquicardia e hipertensión
arterial; trastornos del ritmo cardíaco y respiratorio;
las secreciones bronquiales son muy
492
abundantes y el enfermo es capaz de morir en paro Epilepsia benigna de la infancia con espigas
cardiorrespiratorio, por una insuficiencia cardíaca centrotemporales
aguda o por una insuficiencia renal, también aguda. Las crisis son focales y afectan a infantes, por lo
La epilepsia parcial continua es una forma focal demás normales, entre los 3 y 13 años de edad;
rara de convulsiones clónicas de la mano o de la desapa- recen casi siempre alrededor de los 15 años.
cara, en la que la crisis recurre a intervalos de se- Los ata- ques son breves, motores o sensitivos,
gundos o pocos minutos, y que acostumbra durar de una hemicara, y tienden a extenderse a los
días y semanas. miembros y generalizarse. Son muy frecuentes
En ocasiones, sólo el EEG confirma el diagnósti- durante el sueño. Predomina en el sexo masculino
co de EME, sobre todo de las formas parciales com- y hay predisposi- ción genética (herencia
plejas y de las generalizadas, ya que estas últimas autosómica dominante) y fa- miliares
son muy prolongadas e ininterrumpidas, las convul- asintomáticos tienen anormalidades
siones son con frecuencia muy poco evidentes y el electroencefalográficas. El EEG muestra un patrón
enfermo está comatoso con episodios paroxísticos característico de espigas de alto voltaje u ondas
de taquicardia, hipertensión arterial e hipertermia, agudas en la región centrotemporal, que cambia su
mientras persiste la actividad eléctrica cerebral anor- topografía de un lado a otro. La medicación
mal, con las mismas implicaciones que si estuviera antiepi- léptica es efectiva.
presente clínicamente la crisis.
A continuación se exponen de forma breve algu- Síndromes epilépticos secundarios
nos de los principales síndromes epilépticos de la Síndrome de Lennox-Gastaut
clasificación de la ILAE. La edad de comienzo es entre 1 y 8 años, más fre-
cuente en la etapa prescolar. Las crisis son tónicas
Síndromes epilépticos idiopáticos (especialmente axiales), atónicas y con ataques de
Convulsión benigna neonatal ausencia; menos comunes son las mioclónicas y las
Es una enfermedad a la que no se le conoce causa, tonicoclónicas, generalizadas o focales. El número
que se presenta en niños normales entre el segundo de crisis es alto. Por lo común padecen de un EME
caracterizado por mioclonias, crisis tónicas y crisis
y sexto días de nacidos. Las convulsiones son tóni-
atónicas, con estado de estupor profundo. En el
cas o clónicas, a veces se presentan crisis de apnea y
EEG se muestra una actividad de fondo anormal,
duran días o semanas. Una parte de los enfermos
puntas y ondas lentas de menos de 3 ciclos por s y
tiene una forma hereditaria (convulsión neonatal be-
anorma- lidades poco características multifocales.
nigna familiar), y algunos casos tienen una muta- Durante el sueño se observan sacudidas de ritmo
ción en el cromosoma 20. Cerca del 14 % de los rápido.
pacientes desarrollan epilepsia posteriormente. Este síndrome es producto de anormalidades del
desarrollo, hipoxia o isquemia perinatal, traumatis-
Epilepsia mioclónica juvenil mo, infección y otras lesiones. Tiene mal
La causa no se conoce, aparece en la adolescencia y pronóstico, hay retraso mental y las consecuencias
se expresa por sacudidas mioclónicas bilaterales irre- psicosocia- les de la epilepsia mal controlada, ya
gulares, únicas o repetidas, con predominio en los que apenas responde al tratamiento.
brazos. Son más frecuentes en la mañana, al desper-
tar, y la privación del sueño las precipitan. Son co- Epilepsia temporal medial (epilepsia hipocámpica,
munes las convulsiones tonicoclónicas asociadas y epilepsia límbica mesiobasal, epilepsia psicomoto-
también las crisis de ausencia. El EEG intercrisis ra rinencefálica)
y durante ellas muestra puntas y ondas, y polipuntas y Este síndrome comprende del 70 al 80 % de las
ondas generalizadas irregulares. Con regularidad hay epi- lepsias del lóbulo temporal. Las crisis son
ataques reflejos a la luz e historia familiar de epilep- parciales simples o parciales complejas, y pueden
sia. Los estudios genéticos sugieren una causa generali- zarse. Los síntomas son muy variados:
poligénica. Las crisis responden bien a la medica- sensaciones extrañas, alucinaciones auditivas,
ción antiepiléptica. gustativas y olfatorias; interrupción del
movimiento, automatis- mos (especialmente
orofaciales). Los enfermos pre- sentan trastornos en
el aprendizaje y la memoria. El
493
EEG entre los ataques es normal o tiene ondas agu- Los epilépticos desarrollan con frecuencia depre-
das temporales anteriores, sobre todo durante el sue- sión, ansiedad y psicosis. La depresión lleva a
ño, y durante la crisis, aplanamiento unilateral inicial veces al suicidio. Estos pacientes, especialmente
en el lóbulo temporal, además de ondas agudas de 4 los afec- tados con crisis parciales complejas,
a 6 ciclos/s. El estudio estereoelectroencefalográfi- tienen rasgos anormales de la personalidad y
co muestra puntas de alta frecuencia y bajo voltaje presentan alteracio- nes psíquicas, como prolijidad,
que se originan en un hipocampo y se propagan a la torpeza, pobre ima- ginación, egocentrismo,
amígdala ipsilateral, a la circunvolución cingulada explosividad, irritabilidad, responsabilidad
y a las estructuras mediobasales contralaterales. exagerada, que son independientes de los ataques
La resonancia magnética de alta resolución per- e, incluso, a veces los preceden. Las
mite definir la esclerosis del hipocampo, que es la manifestaciones demenciales que se presentan en
causa más frecuente del síndrome, o las otras menos estos enfermos, sí parecen estar en relación directa
comunes: gangliomas, hamartomas, malformaciones con la frecuencia de los ataques, ya que hay isque-
arteriovenosas , astrocitomas y oligodendrogliomas. mia e hipoxia nerviosas que van destruyendo de
El síndrome tiende a ser refractario al tratamiento manera progresiva el cerebro. Con más facilidad se
lesiona un cerebro en desarrollo que uno adulto.
anticonvulsivo, pero responde muy bien a la inter-
vención quirúrgica. La demencia epiléptica se manifiesta por dismi-
nución de la memoria y de la atención, lentitud y
Convulsiones febriles pobreza del pensamiento, incapacidad de concen-
Ocurren primariamente en niños de 3 meses a 5 años tración y, en sus grados avanzados, por oligofrenia
de edad. Los enfermos no tienen una infección del marcada con pérdida del lenguaje. No aparece ne-
SNC; tiene una predisposición genética y hasta el 4 % cesariamente en todos los enfermos y la historia
de los niños la padecen. En esquema, se consideran tie- ne ejemplos de hombres célebres epilépticos.
dos variables de convulsiones febriles: las “benig- Cuanto más tardía en la vida es su presentación,
nas” o “simples”, que son breves, únicas y generali- más con- servación de las facultades mentales se
zadas; y las complicadas, que son focales, duran más observa, y viceversa. La crisis de ausencia causa
de 15 min o son recurrentes, con 2 o más episodios menos dete- rioro mental que las tonicoclónicas.
en menos de 24 h. La ocurrencia de convulsiones Diagnóstico
febriles se asocia a un 2 % de epilepsia de forma Diagnóstico positivo
posterior; la incidencia es mayor entre los niños con Cuando el médico asiste al desarrollo de una crisis
convulsiones complicadas, examen neurológico epiléptica, generalmente no tiene dificultades para
anormal, menores de 1 año y con historia familiar afirmar la existencia de la enfermedad, pero esto
de epilepsia. ocurre pocas veces y el diagnóstico sólo se estable-
ce por el interrogatorio del paciente o de sus fami-
Aspectos neuropsiquiátricos liares, en el que se trata de precisar la forma de
y psicosociales comienzo del ataque, su evolución, las
modificacio- nes que ha sufrido, la noción de
Las causas de la epilepsia, el grado de control logra-
recurrencia, la exis- tencia de síntomas
do con el tratamiento y los efectos colaterales de la
premonitorios (aura), relajación de esfínteres, etc.
medicación antiepiléptica, influyen de manera po-
Mediante el examen físico se bus- carán huellas de
derosa en estos aspectos. mordedura de la lengua o trauma- tismos recibidos
Muchos pacientes son completamente normales durante la crisis.
entre las crisis, pero aquellos con anormalidades del
desarrollo del sistema nervioso o lesiones postrau- Diagnóstico diferencial
máticas, suelen presentar alteraciones de las funcio- Algunas afecciones simulan una crisis epiléptica y,
nes cognitivas, además de otras deficiencias entre ellas, las más importantes son la histeria, esta-
neurológicas. También hay alteraciones de la me- dos sincopales, hipoglicemia, tetania, isquemia ce-
moria y de la atención. rebral transitoria, etc. Un interrogatorio cuidadoso
y un examen físico exhaustivo con la ayuda de las
pruebas complementarias adecuadas (ECG, EEG,
494
TAC, RMN, glicemia, creatinina, ionograma, cal- El EEG permite detectar el foco epileptógeno
cio, magnesio y otras que oriente la clínica), permi- con mayor precisión; sin embargo, para que las
tirán descartar estas y otras causas de ataques altera- ciones electroencefalográficas tengan
cerebrales paroxísticos y afirmar la epilepsia. valor real, deben estar localizadas en la misma
El EEG es concluyente, aunque en muchos enfer- región en va- rios exámenes sucesivos y, además,
mos es normal entre las crisis. Con frecuencia la apa- guardar concor- dancia con la topografía que
rición del trazado epiléptico se provoca mediante la señala la clínica. Con frecuencia estas alteraciones
hiperventilación, la estimulación luminosa y el sue- varían su morfología, ritmo y topografía de un
ño natural, o es inducido por barbitúricos, o por el examen a otro, especial- mente en la crisis
contrario, por la privación de aquél. No se conside- psicomotriz. No rara vez un foco
ra completa una investigación electroencefalográfica electroencefalográfico se acompaña de otro similar
si no se realizan estas pruebas. En epígrafes anterio- en el mismo sitio del hemisferio opuesto (foco en
res se hizo mención de los casos en que sólo se de- espejo). En ocasiones es este foco reflejo el único
tectaba anormalidad mediante el uso de electrodos que se manifiesta en el trazado. A veces la descarga
especiales (esfenoidales, intracerebrales, etc.). En epiléptica tiene lugar en una zona del cerebro que
ocasiones se efectúa monitoreo prolongado por vi- se propaga a otra del hemisferio cerebral, donde
deo electroencefalográfico y electrocardiográfico. La se obtienen las alteraciones electroencefalográficas.
determinación de los niveles de prolactina sérica ele- Se supuso que en la epilepsia generalizada la
vada 30 min después de producida una crisis gene- zona epileptógena residía en la formación reticular
ralizada o una parcial compleja, es útil para el meso- diencefálica en el sistema intralaminar
diagnóstico diferencial con una crisis de origen psí- inespecífico del tálamo (centroencéfalo de
quico. Penfield). Hoy son cada día más los que piensan
Es necesario insistir en que el EEG permanece que la epilepsia gene- ralizada es focal, que se
normal en 1 de cada 4 casos, por lo que los hechos inicia en una zona que de inmediato trasmite su
clínicos deben valorarse con mucho cuidado. descarga a todo el cerebro. El foco sería, sobre
todo, frontal.
Diagnóstico topográfico
En la mayoría de las crisis epilépticas parciales, la Diagnóstico etiológico
localización del foco resulta fácil. Cuando se gene- Representa la etapa final en el diagnóstico de una
ralizan, el aura epiléptica adquiere un valor topo- epilepsia. Una historia clínica exhaustiva y el uso
gráfico inmenso. A continuación se exponen algunas racional de los medios diagnósticos neurológicos,
manifestaciones focales y los sitios correspondien- permiten encontrar la causa cuando esta existe.
tes de disfunción cerebral. Según la edad de presentación de la epilepsia,
Contracción localizada Lóbulo frontal pueden esquematizarse sus causas más frecuentes
de músculos. (corteza motora). de la manera siguiente:
Parestesia o adormeci- Lóbulo parietal 1. Período neonatal e infancia temprana:
miento localizado. (corteza sensitiva). • Encefalopatía hipóxica-isquémica.
Movimientos gustatorios Lóbulo temporal
• Traumatismo perinatal.
de chupeteo y chasquido (porción anterior).
• Infección del sistema nervioso central.
de la lengua y labios.
• Enfermedades metabólicas.
Alucinaciones olfatorias. Lóbulo temporal,
• Niños nacidos de madres drogadictas (cocaí-
porción anteromedial.
na, heroína, alcohol).
Alucinaciones visuales Región temporopa-
• Hipoglicemia e hipocalcemia.
(imágenes formadas). rietoccipital.
• Errores innatos del metabolismo.
Alucinaciones visuales Lóbulo occipital.
• Deficiencia de piridoxina.
(imágenes de destellos
• Convulsiones neonatales benignas, heredita-
de luz, relámpagos,
flash, etc.). rias o idiopáticas.
2. Período de la infancia tardía y la niñez tem-
Automatismos complejos. Lóbulo temporal.
prana:
• Convulsiones febriles.
495
• Ausencia epiléptica. evitar el estreñimiento y prohibir las bebidas alco-
• Epilepsia benigna de la infancia y la niñez hólicas. El paciente debe tener horas regulares de
con espigas centrotemporales. sueño, realizar una actividad física moderada y evi-
• Convulsiones generalizadas tonicoclónicas tar la fatiga. No se le permitirá conducir automóvi-
idiopáticas. les, a no ser que haya estado 1 o 2 años libre de
• Epilepsia del lóbulo temporal. crisis. Deben laborar en lugares que estén despro-
• Trastornos del desarrollo. vistos de objetos y maquinarias que puedan herirlos
• Traumatismo craneoencefálico. en caso de ataque y prohibirse el trabajo en alturas
• Infección del sistema nervioso central. peligrosas.
• Tumores cerebrales. Los niños serán estimulados a asistir a la escuela
• Síndrome de Lennox-Gastaut. y los adultos deben permanecer en actividad
3. Período de la adolescencia y edad adulta tem- laboral el mayor tiempo posible. Hay que brindar
prana: soporte psicoterapéutico al enfermo y a sus
• Síndromes epilépticos genéticos e idiopáticos. familiares, y en caso de alteraciones mentales
• Traumatismo craneoencefálico. profundas se debe so- licitar el concurso de un
• Infección del sistema nervioso central. psiquiatra.
• Tumor cerebral. Cuando exista una causa orgánica susceptible de
• Anormalidades congénitas del sistema nervio- corrección quirúrgica, se recomendará la interven-
so central. ción, pero teniendo en cuenta que después de extir-
• Drogadicción. pada la lesión el 50 % de los enfermos persiste con
• Alcoholismo y síndromes de supresión alco- crisis, aunque de menor intensidad y frecuencia.
hólica. Los pacientes con graves trastornos psicosociales y
• Síndromes epilépticos genéticos e idiopáticos. cri- sis rebeldes a la terapéutica médica, se deben
4. Período de la edad adulta y adulto mayor. valo- rar para someterlos a alguno de los
procederes quirúrgicos estereotáxicos, cuyos
• Enfermedad cerebrovascular.
resultados son muy alentadores.
• Traumatismo craneoencefálico.
El tratamiento medicamentoso se indica en to-
• Tumores del sistema nervioso central.
dos los casos y tiene que ser prolongado, quizás por
• Enfermedad degenerativa.
tiempo indefinido. Tanto en la epilepsia generaliza-
da como en la parcial, el número de neuronas que
Las otras causas de crisis epilépticas (metabóli-
descargan tiende a autoperpetuarse y a aumentar el
cas, endocrinas, hematológicas, vasculíticas), apa-
de las constituyentes del foco a causa del efecto de
recen en cualquier edad.
la descarga en las células perifocales. Los medica-
En un trabajo de investigación del Dr. Dorado
mentos antiepilépticos deben administrarse en
Gallegos, realizado en Santiago de Cuba, bajo el tí-
dosis suficientes para alcanzar concentraciones
tulo de “La epilepsia tardía”, es decir, epilepsia de
séricas terapéuticas sin llegar a las concentraciones
inicio en mayores de 30 años, se encontró que el 54 %
tóxicas. Para ello es conveniente hacer mediciones
de los pacientes no tenía factor etiológico demostra-
periódi- cas de dichas concentraciones.
ble; el 17,5 % se debió a causas cerebrovasculares,
El tratamiento se comienza sólo con una droga,
de los cuales el 64 % era por malformación vascular
preferiblemente la de elección para la variedad de
congénita. El 13 % de los enfermos tenía un tumor
crisis que esté presente. La dosis inicial debe ser
cerebral, primario o metastásico. El traumatismo
baja e incrementarse cada semana hasta que se
craneano tuvo una frecuencia de 11 %. Le siguieron
alcance la dosis promedio que suprima los ataques,
las causas infecciosas con un 2,5 %, todos por abs-
y en caso de no controlarse, se debe subir hasta la
ceso cerebral. Finalmente hubo un caso de enferme-
máxima; si no se producen reacciones tóxicas y
dad de Alzheimer-Pick.
los niveles séricos son óptimos y no alcanzan los
Tratamiento tóxicos, se continúa así. En caso contrario, se
añade otra droga, que si controla el cuadro clínico,
Con los enfermos epilépticos debe seguirse una se- permite reducir o eliminar la primera. Si con esta
rie de medidas higienodietéticas generales. Hay que segunda droga no se obtiene el efecto deseado, se
añade una tercera, que
496
en caso de fracaso obligaría al uso de los últimos a 400 mg al día, por vía oral, repartidos en 1, 2 o 3
medicamentos antiepilépticos, sobre los cuales no tomas. No debe excederse de 500 mg diarios, pues
tenemos aún experiencia suficiente. Si aún no hay origina un síndrome vestibulocerebeloso muy mo-
control de las crisis, se recomienda entonces la ci- lesto.
rugía. Puede ocasionar un rash morbiliforme, que cede
De forma esquemática se expone a continuación al disminuir la dosis; anemia megaloblástica (por
todo lo antes dicho sobre el tratamiento medicamen- deficiencia de ácido fólico), gingivitis hipertrófica,
toso de la epilepsia. eritema multiforme, síndrome adénico (seudolinfo-
ma) y una enfermedad parecida al lupus
Comienzo con droga de elección Control eritematoso. Estas reacciones disminuyen en
de las crisis Fallo terapéutico (50 %) frecuencia e inten- sidad si la dosis se fracciona en
No efecto adverso (50 %) 24 h.
Carbamazepina (Tegretol). Algunos autores la
Mejoría de la calidad de Añadir 2da. y 3ra. drogas señalan como el medicamento de elección en las
vida
crisis parciales complejas del lóbulo temporal es-
Adecuación psicosocial Fallo terapéutico después pecialmente. Se utiliza por vía oral en dosis de
de 2da. y 3ra. drogas 200 a 400 mg 2 o 3 veces al día. Se recomienda
comen- zar con dosis bajas. Resulta efectiva en las
Uso de los nuevos
crisis ge- neralizadas tonicoclónicas. Sus
antiepilépticos
principales efectos colaterales son vértigos,
Fallo terapéutico zumbidos de oído y depre- sión medular. Hemos
observado un caso de brote hemorroidal agudo,
Tratamiento quirúrgico otro de estafilococia cutánea y otro que simuló un
lupus eritematoso; pero el más dramático fue uno
Se ha recomendado la suspensión gradual del tra- de reducción del campo visual con visión
tamiento cuando el enfermo ha permanecido libre exclusiva del cuadrante superior derecho, que
de ataques durante 3 a 5 años. Esto debe hacerse evolucionó junto a un síndrome cerebeloso, y que
muy lentamente, por la posibilidad de producirse un desaparecieron ambos a las 72 h de suspendido el
EME. medicamento.
Una vez suspendido el tratamiento medicamen- Fenobarbital. Se administra en forma de tabletas
toso, alrededor del 50 % de los pacientes permane- o elixir, 50 a 100 mg cada 8 a 12 h o en una sola
cerá sin crisis. Los otros serán sometidos a la dosis (100 mg) al acostarse. Su principal efecto co-
medicación otra vez, probablemente de forma inde- lateral en el adulto es la somnolencia y en el niño,
finida. El objetivo de la terapéutica medicamentosa un síndrome de hiperactividad. Rara vez provoca
será la supresión de los ataques, lo que no siempre der- matitis exfoliativa y rash morbiliforme.
se consigue, pero sí lograr la reducción del número También nistagmo, ataxia y dificultades en el
de éstos, que le permita llevar una vida social y la- aprendizaje. El rash y la dermatitis obligan a la
boral limitada, pero útil. En caso contrario, debe suspensión del me- dicamento. Se indica en las
valorarse la posibilidad neuroquirúrgica o el inter- convulsiones generali- zadas tonicoclónicas y
namiento del paciente en un servicio de enfermos en las parciales con componente motor. Tiene
psiquiátricos crónicos muy poco uso en nuestros días.
Cuando tenga una psicosis epiléptica prolonga- Primidona (Mysoline). Químicamente es similar
da, se tratará además como una esquizofrenia para- al fenobarbital, y como este, produce somnolencia,
noide. vértigos y náuseas. Tiene utilidad en las crisis toni-
Los medicamentos más recomendados, sus indi- coclónicas y en las parciales con foco temporal. Se
caciones y dosis son los siguientes: administra por vía oral, de 250 a 500 mg 3 veces al
Difenilhidantoína (Convulsín). Es muy útil en las día. En la actualidad se usa poco.
crisis generalizadas tonicoclónicas y en las parcia- Etosuximida (Zarontín). Constituye un medi-
les con componente motor. Se usa en dosis de 200 camento muy útil en el tratamiento de las crisis de
ausencia. Se recomienda su uso en aquellas
circuns- tancias en que el trazado
electroncefalográfico mues- tra un patrón punta-
onda, aunque las manifestaciones
497
clínicas no sean de una ausencia pura. Sus efectos o no. No se aconseja su administración a los niños.
colaterales son reducidos. Se utiliza en dosis de 250 No se debe suspender bruscamente y hay que vigi-
a 500 mg cada 8 a 12 h, por vía oral. Es muy efecti- lar a los enfermos con insuficiencia renal, las muje-
va y algunos aconsejan su asociación a uno de los res que lactan y a los ancianos.
medicamentos activos en el Gran mal, pues de lo El fármaco no es metabolizado ni se une a las
contrario pudiera desencadenarse una crisis de éste. pro- teínas, y no interfiere en la farmacocinética de
Ácido valproico (Depakene, Depakote). Se em- otros antiepilépticos. Se elimina exclusivamente
plea en el tratamiento de cualquier variedad de ata- por el riñón. Sus efectos colaterales son
que epiléptico que se hace resistente y no responde a inestabilidad, ataxia, cefalea, diplopia y fatiga.
los tratamientos habituales, y se le recomienda Felbamato (Felbatón). Se expende en tabletas
como la primera elección para el de la crisis tonico-
ranuradas de 400 a 600 mg y en suspensión con 600
clónica pura, la epilepsia juvenil mioclónica, crisis
mg por cada 5 ml. Es muy potente. La dosis
refleja fotosensible y la epilepsia con crisis combi-
nadas de ausencia y convulsión tonicoclónica. Se máxima es de 45 mg/kg de peso/día o 3 600
administra en dosis de 200 a 400 mg 4 veces al día. mg/día. Es efectivo como medicación única y
Sus efectos colaterales son la caída del cabello, como complemento de otros antiepilépticos en
hiperfagia, temblor e insuficiencia hepática grave, convulsiones parciales con o sin generalización, y
por lo que su uso obliga al control frecuente de la en el síndrome de Lennox- Gastaut. Cuando se
función del hígado. administra junto con difenilhi- dantoína, aumentan
Clonazepán (Clonopín, Rivotril). En ocasiones es los niveles de ésta. En realidad, la dosis de 3 600
útil como la segunda o tercera opción para el trata- mg/día interfiere el metabolismo de la
miento de los ataques atónicos con caída, crisis carbamazepina y del valproato. Está contrain-
mioclónicas y las de ausencia. La dosis de inicio es dicado si hay historia de hepatopatía o de discrasia
de 0,5 mg al día, que se va aumentando cada 3 a 5 sanguínea. Sus principales reacciones colaterales son
días hasta lograr el control de las crisis o la sedación anorexia, vómitos, insomnio, náuseas, cefalea, in-
sea prohibitiva. Puede producirse ataxia e irritabili- suficiencia hepática y anemia aplástica.
dad, pero su efecto colateral más común (10 % de Lamotrigina (Lamictal). Dos estudios europeos
los casos) y molesto es la diarrea. demostraron que este fármaco es tan efectivo como
Acetazolamida (Diamox, Glaumox). Esta droga, la difenilhidantoína o la carbamazepina para con-
inhibidora de la anhidrasa carbónica, es útil como trolar las crisis parciales, simples o complejas, y las
complemento de otros medicamentos antiepilépti- secundariamente generalizadas. También es útil
cos por el estado de acidosis metabólica (deprime la para reducir las atónicas del síndrome de Lennox-
conducción del impulso nervioso) y la depleción Gastaut. Se presenta en tabletas de 25, 100, 150 y
hídrica que produce. Se recomienda en el tratamiento 200 mg.
de la ausencia, mioclonias y crisis atónicas, y en el
El tratamiento se inicia con 50 mg diarios y se
de las generalizadas o parciales que se presentan en
aumenta la dosis cada 1 o 2 semanas, hasta
relación con la menstruación. Se utiliza en dosis de 250
llegar a 400 o 500 mg diarios en 2 o 3 tomas. La
a 500 mg por vía oral 2 o 3 veces al día, por perío-
carbama- zepina, la difenilhidantoína y el
dos de tiempo limitados.
Diazepam. En dosis de 10 mg 2 a 4 veces al día fenobarbital redu- cen la vida media de la
por vía oral, resulta útil como medicación comple- lamotrigina, mientras que el valproato la prolonga
mentaria, especialmente en la epilepsia temporal y hasta el doble. Las reacciones adversas que obligan
en los casos con trastornos neuropsiquiátricos. a suspender el medicamento son el síndrome de
Gabapentín (Neurontín). Es uno de los nuevos Stevens-Johnson, un síndrome parecido al lupus
antiepilépticos. Se expende en cápsulas de 100, 300 eritematoso y la necrolisis tóxica epidérmica. No
y 400 mg; la dosis diaria del adulto oscila entre 900 se recomienda su administración a enfermos
y 2 400 mg divididos en 2 o 3 tomas. El fabricante menores de 16 años, ni a mujeres embara- zadas ni
lo recomienda como complemento de la terapéutica durante la lactancia. Debe evitarse la sus- pensión
antiepiléptica en las crisis parciales, generalizadas brusca del medicamento. Náuseas y vómitos,
inestabilidad y ataxia, visión borrosa y diplopia,
son otras reacciones adversas de la droga.
Tiagabina (Gabitril). Está considerada en el tra-
tamiento de las crisis parciales, como complemento
498
de otros antiepilépticos. Viene en tabletas de 4, 12, Crisis/síndrome Primera opción Segunda opción
16 y 20 mg. Debe tomarse con las comidas. La dosis
máxima recomendada es de 32 mg diarios en los Tonicoclónica Convulsín o Fenobarbital o
Tegretol o valproato primidona
menores de 18 años y de 56 mg en los mayores de Ausencia Etosuximida Valproato
esa edad, y debe repartirse en 2 o 4 tomas. No se Ausencia + Valproato Lamotrigina.
aconseja en niños menores de 12 años, en las he- Gran mal Etosuximida +
Convulsín o
patopatías, ancianos, embarazadas y en las mujeres
etosuximida +
que lactan. Los niveles séricos descienden cuando se Tegretol
administra con difenilhidantoína, carbamazepina y
Mioclónica juvenil Valproato Lamotrigina
fenobarbital. Puede interactuar con el valproato. Epilepsia con Carbamazepina Valproato
Las reacciones adversas consisten en somnolen- espigas centrotem-
cia, nerviosismo, inestabilidad, temblor, dolor ab- porales
dominal, rash, dificultades en la concentración y Lennox-Gastaut Tiagabina sola Valproato + car-
trastornos oftalmológicos, con el uso prolongado. o con carbamaze- bamazepina
pina
Mefenitoína (Mesantoín). Se utiliza en las con-
vulsiones tonicoclónicas generalizadas y parciales Epilepsia temporal Carbamazepina o Lamotrigina
Convulsín
(jacksoniana) y en las crisis psicomotoras refracta-
rias. Viene en tabletas ranuradas de 100 mg. La do- Epilepsia frontal Carbamazepina Lamotrigina
o Convulsín o
sis diaria oscila entre 200 y 600 mg en el adulto, y
valproato
entre 100 y 400 mg en el niño; se reparte en 2 o 3
tomas. Debe darse con precaución en diabéticos,
Tratamiento del estado de mal epiléptico
hepatopatías, con el uso de anticonceptivos orales,
Deben tomarse las medidas necesarias para evitar
en el embarazo y en las mujeres que lactan. Es
antagonizada por el alcohol (alcoholismo crónico), los traumatismos y las mordeduras de la lengua y
la carbamazepina y los antidepresivos tricíclicos. de los carrillos. Hay que asegurar la
Topiramato (Topamax). Su indicación fundamen- tal permeabilidad de las vías aéreas y respiratorias, y
es el tratamiento de las crisis de comienzo par- cial, aplicar medidas antitérmicas.
como medicación complementaria. Viene en Hay que administrar antibióticos para impedir la
tabletas de 25, 100 y 200 mg. No se recomienda su infección broncopulmonar y vigilar la instalación
administración a los niños y a las mujeres que lactan. de insuficiencia o de trastornos graves del ritmo
La dosis habitual del adulto es de 400 mg al día, car- díaco, para en caso de presentarse, actuar con
en 2 tomas. La dosis máxima es hasta 1,6 g/día. De- energía. El oxígeno está indicado desde el
comienzo del tratamiento. Algunos recomiendan la
ben tomarse precauciones ante hepatopatías, insufi-
administración EV de 50 mg de dextrosa al 50 %
ciencia renal y en el embarazo. La difenilhidantoína,
con vitaminas del complejo B, especialmente
carbamazepina y el valproato reducen los niveles vitaminas B1 (100 mg) y B6 (50 mg). El diazepam
séricos del topiramato. El medicamento antagoniza
es el medicamento más uti- lizado en nuestro medio
con la digoxina y los anticonceptivos orales. No se
para tratar el EME convul- sivo. Se aplica por vía
aconseja su administración junto con los inhibidores EV a razón de 1 mg/min hasta que cesen las
de la anhidrasa carbónica. Las reacciones colatera- convulsiones, y no se debe pasar de 20 mg. Luego se
les principales son la somnolencia, inestabilidad, continúa con 10 mg cada 6 u 8 h por vía IM o EV
ataxia, trastornos del habla, enlentecimiento y se suspende la medicación a los 3 o 4
psicomotor, nerviosismo, parestesias, nistagmo, tem- días si el enfermo se recupera.
blor, confusión, ansiedad, adelgazamiento, anorexia, En combinación con el diazepam o como única
fatiga y otros. medicación se utiliza la fosfofenitoína, en infusión
Las drogas que comúnmente se utilizan en el tra- EV, 750 mg como dosis total, y no administrar más
tamiento de las crisis y síndromes epilépticos, se re- de 150 mg/min.
sumen a continuación.
499
El difenilhidantoinato de sodio (Convulsín) por lo que debe tenerse presente esta posibilidad
inyectable es utilizado y recomendado por algunos para imponer tratamiento con manitol EV.
autores como la medicación de elección. Se aplica
por vía EV, 18 mg/kg de peso (disuelto en solución La epilepsia en el embarazo
salina al 0,45 o 0,9 %) en forma de bolo, a veloci- La mayoría de las epilépticas embarazadas no ten-
dad no mayor de 50 mg/min. De esta forma se lo- drán complicaciones durante la gestación y el parto,
gran niveles terapéuticos durante 24 h. La dosis de y el niño será normal. Las crisis permanecerán
mantenimiento oscila entre 4 y 7 mg/kg de peso/día. igua- les, o se harán más frecuentes, o disminuirán
El Convulsín se administra también por vía IM (si a cau- sa de factores endocrinos, alteraciones
así lo recomienda el fabricante), en dosis de 100 en el metabolismo de los medicamentos y en la
a 600 mg cada 6 h. capaci- dad de unión de éstos a las proteínas; todo
El clonazepam (para algunos es la primera op- ello por los cambios biológicos que comporta un
ción) se usa en dosis de 0,1 mg/kg de peso, en bolo embarazo. No obstante, las anomalías fetales son 2
EV a razón de 4 mg en 2 min. Puede repetirse a veces más comunes que en la población sana, lo
los 15 min si no se ha logrado el control de las con- que en parte se debe a la teratogenicidad de los
vulsiones. medicamentos antiepilépticos utilizados,
El fenobarbital se utiliza en infusión EV a razón especialmente durante el primer trimestre. Pero el
de 100 mg/min, hasta que cesen las convulsiones o daño que causa a la madre y al feto una epilepsia
se haya administrado una dosis total de 10 mg/kg de descontrolada es mayor que el efecto de las drogas,
peso. Si las convulsiones persisten, se continúa con por lo que es necesario tratar a la embarazada y
el fenobarbital a razón de 50 mg/min hasta un total lograr el control de las crisis, con la dosis menor,
de 20 mg/kg. pero efectiva, del medicamento, aún a riesgo de
El paraldehído ha resultado muy útil también en malformación fetal.
dosis de 5 ml por vía EV, lentamente, que se repite Se ha descrito el síndrome fetal por drogas antie-
cada 7 u 8 h en el día si es necesario. pilépticas, que consiste en labio leporino, paladar
Se obtienen buenos resultados con el pentobarbi- hendido, defectos cardíacos, microcefalia, retardo
tal sódico (Pentotal) disolviendo 1 g en 500 ml de del crecimiento, retraso del desarrollo, facies
dextrosa al 5 % y administrándolo en venoclisis a anormal e hipoplasia digital. Además, espina bífida
goteo rápido (15 mg/kg de peso/1 h), seguido por 1 y anoma- lías urogenitales. La espina bífida se
o 2 mg/kg de peso/h, hasta que cesen las convulsio- detecta con el ultrasonido y con la determinación
nes o el EEG muestre ausencia de trazado paroxístico. de los niveles de alfafetoproteína sérica y en el
El tratamiento del enfermo debe realizarse en el líquido amniótico.
servicio de Cuidados Intensivos y en caso de que no Se recomienda por algunos la administración a la
gestante de 15 mg diarios de ácido fólico durante el
responda a las medidas terapéuticas recomendadas
embarazo, y vitamina K (fitonadiona), 1mg intra-
previamente, hay que llegar hasta la anestesia y re-
muscular al recién nacido.
lajación muscular.
Las cinco drogas antiepilépticas principales (car-
En ocasiones el edema cerebral secundario cons-
bamazepina, difenilhidantoína, valproato, primidona
tituye un factor patogénico del estado convulsivo, y fenobarbital) son teratogénicas, por lo que deben
utilizarse con extraordinaria precaución, y algunos
prohiben el valproato durante la gestación.
500
51
ESTADO DE COMA
Concepto procesos patológicos son capaces de alterar la con-
ciencia: los que producen lesión hemisférica bilate-
A los términos conciencia, inconsciencia, estupor y
ral o supresión funcional por hipoxia, hipoglicemia,
coma, se les han asignado tantos y tan diferentes
fármacos o tóxicos, y los que lesionan el tronco en-
significados, que es casi imposible evitar cierta am-
cefálico o causan trastornos metabólicos que alteran
bigüedad en su uso.
o inhiben el SRAA.
El término confusión carece de precisión y de
La base fisiopatológica del coma consiste en una
modo general denota incapacidad para mantener una
destrucción mecánica de áreas fundamentales del
secuencia coherente de pensamiento y acción. Cuan-
tronco encefálico o de la corteza cerebral (coma
do a esto se le suman hiperactividad motora y auto-
ana- tómico), o bien en una interrupción global
nómica, se emplea el término de delirio. Ambos
de los procesos metabólicos cerebrales (coma
estados, junto con la perseveración y las alucina-
metabólico); esto último puede estar producido por
ciones, son trastornos del contenido de la con-
la interrupción en el aporte de sustrato energético
ciencia.
(hipoxia, hipogli- cemia) o por alteración en las
El estupor es el estado en que no es posible des-
respuestas neurofisio- lógicas de las membranas
pertar al paciente mediante estímulos enérgicos, las
neuronales (intoxicación por drogas, fármacos o
respuestas verbales son lentas o nulas y el enfermo
alcohol, metabolitos tóxicos o epilepsia).
hace algún esfuerzo para evitar los estímulos mo-
Una lesión hemisférica (tumor, absceso,
lestos.
hemorra- gia, infarto o meningitis) produce coma
Al estado de coma se le define como un síndro- directamente por su volumen o de manera indirecta
me clínico caracterizado por una pérdida de las fun- por compre- sión, isquemia o hemorragia en el
ciones de la vida de relación y conservación de las mesencéfalo y tála- mo. Esta lesión secundaria
de la vida vegetativa, como expresión de una insu- avanza en dirección descendente por el tallo
ficiencia cerebral aguda y grave. encefálico, sigue una direc- ción rostrocaudal y
causa diferentes niveles de le- sión
Patogenia
anatomofuncional, que se ponen de manifiesto por
De forma general, el contenido de la conciencia (o una cadena ordenada de anomalías clínicas que se
conocimiento) depende de la función de los hemis- resumen en el cuadro 51.1.
ferios cerebrales, y el nivel de conciencia (o estado Menos veces la lesión se localiza en el tronco
de vigilia), de las estructuras del tronco encefálico encefálico; se explica entonces la presencia de
(diencéfalo, cerebro medio y protuberancia). coma por alteración directa del SRAA. Usualmente
Los estudios clínicos y experimentales demues- estas lesiones afectan las estructuras implicadas en
tran que el mantenimiento del estado de conciencia el con- trol de la constricción pupilar y de los
requiere de la continua y efectiva interacción entre movimientos oculares.
los hemisferios cerebrales y ciertos mecanismos Es importante señalar dos aspectos adicionales:
fisiológicos activadores “no específicos”, situados
en la parte alta del tronco encefálico y el tálamo 1. En la fase diencefálica, el proceso es de mane-
ra potencial reversible, pero una vez que apa-
(sistema reticular activador ascendente) (SRAA). En
recen signos de trastornos de la función del
relación con este concepto fisiológico, dos tipos de
cerebro medio, el pronóstico empeora, pues
en esta fase la isquemia presumiblemente ha

501
CUADRO 51.1
FASES DE EVOLUCIÓN CEFALOCAUDAL DE LA HERNIACIÓN CENTRAL
(Tomado de Plum, F. y Posner, J.B.)

Fase Conciencia Pupilas Movimientos Reacciones Respiración Función motora Otros


oculares oculovestibu-
lares

Diencefá- Somnolencia, Pequeñas, Errantes, Reacciones Suspiros, Hipertonicidad


licas estupor, coma. reaccionan conjugados. calóricas Cheyne- generalizada;
poco. anormales; Stokes. signos bilate-
respuestas rales de vías
enérgicas en piramidales.
ojos de
muñeca.
Mesence- Coma. De tamaño No conju- Difíciles de Hiperventi- Postura desce- Hipertemia/
fálica, medio, fijas. gados. producir. tilación rebrada hipotermia.
protube- neurógena bilateral. En ocasiones
rancial central. diabetes
superior. insípida.
Protube- Coma De tamaño Inexistentes. Inexistentes. Taquipnea. Flaccidez
rancial infe- medio, fijas. generalizada;
rior, bulbo Babinski
superior. bilateral; reti-
rada mínima
por flexión.
Bulbar Coma Dilatadas, Inexistentes. Inexistentes. Atáxica, Flaccidez. Pulso
inferior. fijas. periódica, variable;
apnea. colapso
vascular
periférico.
causado cambios irreversibles con necrosis ma- y suele ir precedido de náuseas, vómitos, diplopia,
nifiesta del tallo encefálico (en especial en las nistagmo, ataxia y cefalea occipital. Es frecuente
estructuras paramedias). que la disfunción sea asimétrica, pues es raro que el
2. En la hernia del uncus con compresión lateral tron- co cerebral sea lesionado en un solo plano.
del tallo encefálico, por lo común no se pre- En todos los trastornos metabólicos que dan lu-
senta la fase de trastorno de la función dien- gar al coma, el metabolismo o el flujo sanguíneo
cefálica y el paciente muestra con rapidez signo
cerebral están reducidos. Se desconoce la razón por
de anomalías de la función del cerebro medio.
la que determinadas funciones son más vulnerables
Posteriormente la progresión sigue igual curso
que en la hernia central. De forma característi- que otras a los trastornos metabólicos específicos,
ca aparecen signos de compresión del nervio de manera que la sintomatología puede indicar la
motor ocular común en fase temprana (lo que posibilidad de una causa específica de la encefalo-
origina midriasis homolateral) y del pedúncu- patía, tales como el flapping tremor hepático,
lo cerebral (con hemiparesia contralateral); esto las mioclonias multifocales de la uremia y la
se denomina síndrome de compresión del miosis- hipopnea inducida por opiáceos.
uncus. Todo el curso de deterioro tiende a ser
agudo en esta situación, a diferencia de la evo- Clasificación
lución subaguda que es propia de la hernia Existen múltiples clasificaciones del estado de coma.
transtentorial. Desde el punto de vista etiológico se le divide en:
En las lesiones infratentoriales, el coma se debe a I. Afecciones del sistema nervioso.
la destrucción o compresión de la formación reticular a) Traumáticas:

502
• Contusión y conmoción cerebral. toacidosis diabética, coma hiperosmolar,
• Hematoma epidural. coma hipoglicémico, enfermedad de Addison,
• Hematoma subdural agudo o crónico. síndro- me de Simmonds–Sheehan,
b) Enfermedad cerebrovascular: encefalopatía he- pática, encefalopatía
• Isquémica. urémica, encefalopatía hipercápnica; sepsis
• Hemorrágica. (neumonía, fiebre tifoidea, paludismo,
c) Síndrome neurológico infeccioso: síndrome de Waterhouse–Frideri- chsen);
• Meningoencefalitis. anormalidades del equilibrio acidobá- sico e
• Absceso. hidroelectrolítico (hiper e hiponatremia,
• Tromboflebitis. acidosis y alcalosis, trastornos del equilibrio del
d) Otras causas: calcio y del magnesio); intoxicaciones (alco-
• Estado posictal. hol, fármacos, venenos); trastornos de la regu-
• Tumores. lación térmica (hipotermia, golpe de calor);
• Encefalopatía hipertensiva. otros (colapso circulatorio, contusión y conmo-
• Hipoxia. ción cerebral, convulsiones y estados
II. Ingestión de sustancias tóxicas. posictales, encefalopatía metabólica mixta).
a) Alcohol. II. Enfermedades que producen irritación menín-
b) Psicofármacos. gea (con alteración del LCR), habitualmente
c) Venenos. sin signos de focalización.
III. Trastornos endocrinometabólicos. Hemorragia subaracnoidea, meningitis bacte-
a) Coma en el diabético (hipoglicémico, hi- riana, algunas formas de encefalitis víricas.
perosmolar, cetoacidótico). III. Enfermedades que causan signos de focaliza-
b) Coma tiroideo (tormenta tiroidea, coma ción neurológica o lateralizados, con o sin sig-
mixedematoso). nos meníngeos.
c) Hipocorticalismo (enfermedad de Addison). Hemorragia cerebral, trombosis o embolia ce-
d) Coma hipofisario (Síndrome de Simmonds- rebral, hemorragia dural o subdural, absceso
Sheehan). cerebral, tumor cerebral, otros.
e) Encefalopatía hepática.
f) Encefalopatía urémica. Hay que recordar lo siguiente:
g) Encefalopatía hipercápnica. • Una enfermedad neurológica residual es capaz
h) Encefalopatía metabólica mixta. de ocasionar confusión y, además, acentuarse
IV. Otras causas. en el curso de un trastorno metabólico (hipo-
a) Sepsis (septicemia, paludismo, fiebre tifoi- glicemia, cetoacidosis, uremia, coma hepático
dea, síndrome de Waterhouse-Friderichsen, o alcohólico) o después de un ataque comicial.
etc.). • En la encefalopatía hipertensiva y en la hipo-
b) Trastornos hidroelectrolíticos y acidobásicos glicemia a veces están presentes signos
(hiponatremia, hipernatremia, acidosis, al- focales transitorios.
calosis, trastornos del calcio, fósforo y mag- • Si el coma es profundo, la rigidez de nunca
nesio). por lo general desaparecen o está ausente
c) Trastornos de la regulación térmica (hipo- desde el comienzo.
termia, golpe de calor). • El estado comatoso causado por un infarto ce-
d) Otros. rebral bilateral o una necrosis traumática y he-
morragia en los hemisferios cerebrales,
Raymond Adams clasifica los comas de la forma recuerda a veces el coma de las enfermedades
siguiente: metabólicas y tóxicas, ya que puede estar pre-
I. Enfermedades que no causan signos neuroló- servado el tallo cerebral; por el contrario, los
gicos focales o lateralizados ni signos menín- comas hepático, hipoglicémico e hipóxico re-
geos (ni alteración del LCR). cuerdan en ocasiones el coma debido a lesiones
Hipoxia, enfermedades endocrinometabólicas del tallo cerebral al provocar posturas de des-
cerebración.
(tormenta tiroidea, coma mixedematoso, ce-
503
En cuanto al porcentaje de daño cerebral, según más, también posee un valor considerable para el
el sitio y causa del coma tenemos: diagnóstico etiológico.
En la anamnesis es muy importante conocer por
I. Coma por lesión anatómica: testigos o allegados:
• Supratentorial 15 a 20 %.
• Infratentorial 10 a 15 %. 1. Las circunstancias en las que se ha encontrado
Causa principal: enfermedades cerebro- al enfermo: lugar exacto, indicios de violen-
vasculares y traumatismos. cia, existencia de medicamentos en las proxi-
II. Coma por lesiones difusas (tóxico-metabóli- midades u otros datos que hagan pensar en
cos) 65 a 75 %. una intoxicación.
Causa principal: intoxicaciones exógenas 2. Perfil temporal (expresión clínica) del inicio
agudas. de la sintomatología.
3. Uso de fármacos, drogas o alcohol.
Cuadro clínico 4. Antecedentes de hepatopatía, nefropatías, cardio-
El paciente llega al estado de coma de forma brus- patías, neumopatías, afecciones endocrinas, etc.
ca, como ocurre en el ictus apoplético, o de modo
gradual, como sucede en el coma diabético. Una vez Se debe realizar una exploración general
establecido el coma, el enfermo yace inerte en de- conven- cional, pues algunos signos tienen especial
cúbito pasivo, incapaz de responder a la interpela- valor para el diagnóstico etiológico.
ción oral ni con palabras ni con gestos. Presenta En el paciente que ha sufrido una herida de la
resolución muscular más o menos completa, sin res-
cabeza y en todo politraumatizado, puede haber
puesta a los estímulos dolorosos. Sin embargo, suelen
una fractura de las vértebras cervicales y, por esta
ocurrir gradaciones como se verá posteriormente.
razón, hay que tener mucho cuidado al moverle la
Un paciente en coma siempre es una urgencia. La
cabeza y el cuello por temor a que la medula
imperiosa necesidad de una pronta acción diagnós-
tica y terapéutica no deja tiempo para investigacio- espinal quede inadvertidamente comprimida.
nes pausadas ni disquisiciones académicas. Es Entre los signos externos útiles para orientar el
necesario determinar el proceso patológico subya- diagnóstico están las señales de traumatismos o
cente, la dirección en que evoluciona, así como pro- pin- chazos (diabéticos, adictos a drogas
teger al cerebro contra un daño más severo e intravenosas), la presencia de una fístula de
irreversible. hemodiálisis (pacien- tes con nefropatías crónicas),
El coma no es una entidad patológica indepen- estigmas de hepatopa- tías crónicas (arañas
diente, sino una expresión sintomática de una enfer- vasculares, eritema palmar, ictericia) o de una
medad. Algunas veces la afección es perfectamente enfermedad cardiorrespiratoria crónica (cianosis,
obvia, como cuando un individuo sano sufre un trau- acropaquia), lesiones petequiales sugestivas de
matismo craneoencefálico y queda sin conocimien- sepsis, signos de desnutrición o de des- hidratación,
to. Con demasiada frecuencia, sin embargo, el mordeduras de la lengua que orienten hacia una
paciente es llevado al hospital en estado de coma y epilepsia, etc.
poca o ninguna información se obtiene en los pri- La fiebre es indicativa de infección (temperatu-
meros momentos. En estos casos el médico debe de ras de 42 a 44°C son sugestivas de golpe de calor,
poseer un amplio conocimiento de la entidad y un crisis tirotóxica e intoxicación por
enfoque metódico que no deje sin explorar ninguna anticolinérgicos), mientras que la hipotermia se
de las causas más comunes y tratables de coma. observa con frecuen- cia en exposición a bajas
Una vez instauradas las medidas terapéuticas in- temperaturas, en la intoxi- cación alcohólica o
mediatas, hay que proceder a un examen físico ge- barbitúrica, déficit de líquido extracelular, shock,
neral minucioso del paciente y a una valoración del hipoglicemia y mixedema.
grado y nivel de afectación del sistema nervioso. Como norma general, una alteración del ritmo
La valoración de la afección neurológica tiene cardíaco o de la presión arterial debe atribuirse a
interés para enjuiciar la gravedad inicial del trastor- una causa no neurológica. Sin embargo, en la
no causal del coma y para seguir su evolución. Ade- hiperten- sión intracraneal grave de cualquier
causa, en la he- morragia subaracnoidea y en
los traumatismos craneales, es posible que haya
HTA, bradicardia y
504
alteraciones del ritmo cardíaco e incluso imágenes tán laxos, “caen en plomo”, la pierna hemipléjica
de necrosis miocárdica en el ECG. yace en una posición de rotación externa (esto tam-
La HTA extrema con coma, escasos o nulos sig- bién ocurre en la fractura de cadera), aparece el sig-
nos focales y papiledema es indicativa de una encefa- no de “fumador de pipa” y los ojos miran hacia el
lopatía hipertensiva. lado opuesto a la parálisis.
La hipotensión es un hallazgo clínico habitual en Los cambios posturales son a veces instructivos.
los estados de coma debidos a diabetes, intoxica- La rigidez de descerebración —mandíbula apreta-
ción alcohólica y barbitúrica, shock hipovolémico, da, cuello retraído y brazos en aducción, extensión
cardiogénico o séptico y en la enfermedad de Addi- y pronación, y piernas en hiperextensión y rotación
son. interna— aparece en estados de hernia del lóbulo
La sudoración excesiva apunta a hipoglicemia o temporal, que comprime el mesencéfalo y la protu-
shock; la piel seca indica acidosis diabética y uremia. berancia superior, con hemorragias e infartos de es-
El olor del aliento suele proporcionar un indicio tas estructuras. También la hipoglicemia y la
hacia la causa del coma. El olor del alcohol es fácil- hipoxia provocan esta postura. Se asocian a
mente reconocible (excepto el vodka, que es inodo- lesiones de mal pronóstico.
ro); el olor a frutas pasadas del coma diabético, el La rigidez de decorticación —uno o ambos brazos
olor urinoso de la uremia y el hedor rancio del coma en flexión y aducción y una o las dos piernas exten-
hepático son bastante distintivos para identificarlos. didas— significa lesiones más altas con interrupción
En las mujeres jóvenes hay que practicar siempre un de las vías corticoespinales en la sustancia blanca
examen ginecológico, sobre todo en los intentos de cerebral, cápsula interna y tálamo, y no tienen un
suicidio con fármacos o en el shock tóxico, pues los pronóstico tan malo, ya que aparecen de forma oca-
embarazos no deseados o las maniobras abortivas sional en casos de lesiones potencialmente reversi-
clandestinas en ocasiones están en la base del pro- bles.
La respuesta frente a estímulos dolorosos se
ceso.
debe valorar de forma crítica. Los movimientos de
El examen neurológico, aunque limitado en mu-
retira- da en abducción son una acción voluntaria y
chos aspectos, es de crucial importancia y debe per-
tienen igual significado, mientras que los
mitir establecer la topografía lesional del coma
movimientos de aducción y flexión pueden ser
(supratentorial, infratentorial, difuso-multifocal).
reflejos e indicar una lesión del sistema
Inicialmente se debe “medir” la respuesta del pa-
corticoespinal.
ciente a los estímulos de forma progresiva, desde
De los diversos tests que exploran la función del
estímulos verbales hasta estímulos dolorosos. Se
tronco cerebral, los más útiles son el tipo respirato-
valoran sobre todo las respuestas verbales, oculares
rio, el tamaño y reactividad pupilar, los movimien-
y motoras del enfermo. Se toma nota de la postura
tos oculares y los reflejos oculovestibulares.
dominante del cuerpo, la presencia o ausencia de
movimientos espontáneos, la posición de la cabeza Los patrones respiratorios periódicos debidos a
y de los ojos, la frecuencia, profundidad y ritmo res- alteraciones neurológicas, han adquirido “honores”
piratorio. probablemente inmerecidos en el estudio de la
semiolo- gía del enfermo en coma, ya que con la
La irritación meníngea causará resistencia a la
excepción de la respiración de Cheyne-Stokes, se
flexión pasiva del cuello, pero no a la extensión,
encuentran con poca frecuencia en la práctica
rotación o inclinación de la cabeza. La resistencia al
clínica. Desde el punto de vista clínico, la
movimiento del cuello en todas las direcciones, in-
respiración de Cheyne- Stokes se relaciona con
dica una enfermedad de la médula cervical o es par- lesiones supratentoriales masivas, bilaterales
te de una rigidez generalizada (una hernia cerebelosa profundas y alteraciones meta- bólicas cerebrales,
o del lóbulo temporal, o una rigidez de descerebra- y se atribuye al aislamiento del centro respiratorio
ción, limitan también a veces la flexión pasiva del del resto del cerebro, lo que oca- sionaría una
cuello). excesiva sensibilidad al CO2. En senti- do general,
Una hemiplejía se revela por la ausencia de mo-
los pacientes con compresión del cerebro medio,
vimientos espontáneos o defensivos en respuesta a infarto protuberancial por oclusión de la ar- teria
estímulos dolorosos. Los miembros paralizados es- basilar y lesiones de la parte posterointerna del
bulbo, presentan distintos tipos de alteración respi-
ratoria que tienen valor diagnóstico.
505
Los trastornos pupilares durante el coma indi- rísticas de los movimientos oculares en el paciente
can, por lo general, una lesión del tronco cerebral. en coma. Estos reflejos exploran la integridad del
En los comas de origen metabólico, debido a la re- mesencéfalo, la protuberancia y los núcleos de los
lativa resistencia de las vías pupilares, la reactividad pares craneales III, IV y VI.
pupilar se mantiene hasta los estadios terminales, lo El papiledema suele desarrollarse entre las 12
que tiene gran valor para el diagnóstico etiológico. y 24 h después de un traumatismo y de una hemorra-
Las pupilas redondeadas, reactivas, isocóricas con gia cerebral, pero si es pronunciado, por lo común
un diámetro de 2,5 a 5 mm, casi excluyen una lesión significa que es secundario a un tumor o a un absceso
mesencefálica como causa del coma. cerebral, es decir, a una lesión de más larga evolu-
ción. Las hemorragias retinianas múltiples subhia-
TAMAÑO Y REACTIVIDAD PUPILARES SEGÚN loideas extensas van habitualmente asociadas a la
LA LESIÓN DEL TRONCO CEREBRAL ruptura de un aneurisma sacular o de una
malforma- ción vascular. El papiledema con
OO Pupilas normales • Coma metabólico.
+ + • Lesión diencefálica con exudados retinianos difusos, hemorragias y
integridad del tronco. alteraciones arteriolares es casi un acompañante
obligado de la HTA maligna. Los comas de origen
O O Pupilas midriáticas • Lesión mesencefálica masiva. metabólico cursan con papile- dema, excepto el del
_ _
• Intoxicación por atropínicos,
alcohol metílico o cocaína. hipoparatiroidismo y la intoxi- cación por plomo.
• Anoxia. El resto de la exploración neurológica quizás no
sea esencial para evaluar la profundidad o la fisio-
o o Pupilas mióticas • Lesión pontina. patología del estado de coma, pero sí su causa.
++ • Intoxicación por morfínicos.
_ _
• Hipotermia. Una forma rápida para examinar al paciente co-
matoso es la descrita por Plum y Posner, que se ex-
O o
_
Pupilas anisocóricas • Lesión mesencefálica isolate- pone a continuación.
+ ral. Historia:
• Compresión del III par
craneal (hernia transten-
• Comienzo del coma (gradual o súbito).
torial). • Síntomas recientes (cefalea, depresión, vérti-
• Aneurisma de la arteria go, parálisis focal, etc.).
comu nicante posterior. • Traumatismos recientes.
• Tumor del seno cavernoso.
• Enfermedades médicas previas.
_+ Reactivas a la luz No reactivas + Ligera reacción • Antecedentes psiquiátricos.
Levantando los párpados y dejándolos caer se • Acceso a fármacos.
aprecia su tono. En los pacientes inconscientes
se cierran de forma gradual, movimiento Examen físico general:
imposible de realizar voluntariamente por los • Signos vitales.
histéricos. La au- sencia de tono o la • Evidencia de traumatismo.
imposibilidad de cerrar un pár- pado, sugiere una • Evidencias de enfermedad aguda o crónica.
disfunción del nervio facial del • Evidencia de consumo de drogas.
• Rigidez de nuca.
lado observado.
Los ojos se mantienen de forma continua hacia
Examen físico neurológico:
un lado —hacia el lado opuesto a la parálisis— en
• Respuesta verbal: (a) adecuada, (b) confusa,
las grandes lesiones cerebrales (mirando la lesión) y
(c) inadecuada, (d) incomprensible, (e) au-
hacia el mismo lado de la parálisis en las lesiones
sente.
protuberanciales unilaterales (mirando el lado con-
• Apertura ocular: (a) espontánea, (b) a órde-
trario a la lesión). nes, (c) al dolor, (d) ausente.
Las vías de los reflejos oculovestibulares se en- • Reacciones pupilares: (a) presentes, (b) au-
cuentran en el tronco encefálico, cercanas a las áreas sentes.
que mantienen el estado de conciencia, lo cual ex- • Movimientos oculares espontáneos: (a) orien-
plica la utilidad clínica de determinar las caracte- tados, (b) desviación conjugada, (c) desvia-
506
ción desconjugada, (d) anormales, (e) ausen- ante estímulos muy dolorosos es posible observar
tes. movimientos de retirada fragmentarios e ineficaces.
• Respuesta oculocefálica: (a) normales, (b) Este estado se debe a lesiones en la cercanía del ter-
completas, (c) mínimas, (d) ausentes. cer ventrículo, lesiones bilaterales en el tálamo,
• Respuestas corneales: (a) presentes, (b) au- ganglios basales, cerebro medio o en la circunvolu-
sentes. ción del cuerpo calloso.
• Patrón respiratorio: (a) regular, (b) periódico, El estado apálico se debe a una afección extensa
(c) atáxico. y grave de la sustancia gris, blanca o de ambas en
• Respuesta motora: (a) responde a órdenes, (b) los hemisferios cerebrales, con conservación de las
localiza dolor, (c) flexión anormal, (d) ex- funciones del tallo encefálico. El paciente muestra
tensión anormal, (e) ausente. pérdida de todas las funciones superiores y tiende a
• Reflejos osteotendinosos: (a) normales, (b) manifestar posturas de decorticaciòn crónica con
aumentados, (c) ausentes. poco o ningún movimiento espontáneo; parece des-
• Tono muscular esquelético: (a) normal, (b) pierto, pero no hay reacciones emocionales o de fi-
paratonía, (c) flexor, (d) extensor, (e) flacci- jación o seguimiento ocular en reacción a sucesos
dez. ambientales.
Muerte cerebral (coma irreversible). Es un esta-
En la actualidad la escala de valoración más utili- do en que se han perdido todas las funciones del
zada es la de Glasgow, que se aplica preferiblemente cerebro. En este estado, causado por enfermedades
a los traumatismos craneales (ver capítulo “Trau- intracraneales primarias o por trastornos extracra-
matismos craneoencefálicos y raquimedulares”). neales, la pérdida de la autorregulación cerebral y
la vasoparálisis total con insuficiencia de los
Diagnóstico diferencial
mecanis- mos vasopresores generales, provocan
Los estados de alteración de la conciencia deben paro completo de la circulación intracraneal. Esto
diferenciarse de una situación clínica en la cual haya produce necro- sis grave y extensa del tejido
escaso o nulo trastorno de la conciencia y sí única- cerebral, de forma tal, que se pierde toda actividad
mente cierta incapacidad para responder de forma cerebral significativa, incluyendo la capacidad de
adecuada a causa de parálisis de las extremidades y conservar las funciones respiratorias y
de la función bulbar; los pacientes se muestran mu- cardiovasculares; su presencia implica la existencia
dos y tetrapléjicos, pero plenamente alertas; llama de una lesión irreversible de la totali- dad del
la atención que el cierre ocular se preserva como cerebro, incluido el tronco cerebral, que se asocia a
casi el único movimiento voluntario posible. Este un electroencefalograma plano y a la falta de
estado tiene designaciones variadas: síndrome de llenado de los vasos intracraneales al intentar rea-
encierro, estado deseferente o locked-in syndrome. lizar una angiografía cerebral. Regularmente se
Se debe a menudo a una lesión circunscrita a la base pro- duce paro cardíaco en el transcurso de 3 a 5
del pedúnculo (esta afección respeta las vías de las días, a pesar del tratamiento de sostén.
sensaciones somáticas y los sistemas ascendentes no En años recientes se ha hecho muy importante
específicos y neuronas responsables del despertar este estado, por el mayor interés y utilización, con
y la vigilia, pero interrumpe las vías corticobulbares buenos resultados, de las técnicas de transplante de
y corticomedulares). órganos, que a su vez se hicieron posible debido a
Los grados severos de neuropatías motoras pue- la creación de tratamientos médicos de sostén
agresi- vos y cada vez más eficaces para los
den tener un efecto similar.
enfermos en estado crítico.
El término de mutismo acinético lo utilizó Cairns
Los criterios médico-legales de muerte cerebral
para describir a pacientes que parecen despiertos,
son muy variables, en dependencia de las leyes y la
pero están inconscientes. Estos enfermos muestran
práctica médica local.
claros ciclos de sueño y despertar, abren los ojos y
El diagnóstico de muerte encefálica debe ser rea-
al parecer los fijan para seguir con la vista sucesos
que ocurren en el medio. La persona no necesaria- lizado exclusivamente por médicos de experiencia
mente se encuentra acinética en su totalidad, pues en la valoración de enfermos comatosos. Cuando
no se cumplan todos los criterios o haya dudas,
resultará
507
más adecuado continuar con la observación y las Debe recordarse que un EEG isoélectrico no es
medidas de sostén. sinónimo de muerte cerebral, puesto que sólo refleja
el silencio eléctrico de la corteza cerebral. La in-
Exámenes complementarios toxicación medicamentosa, la hipotermia y las en-
La historia clínica y el examen físico no son sufi- cefalitis víricas son causas conocidas de EEG plano.
cientes para lograr el diagnóstico y evaluar el pro- Pronóstico
nóstico del paciente; siempre se debe recurrir a la La predicción de la evolución de un paciente coma-
práctica de estudios complementarios. toso es compleja y resulta muy difícil definir cuál
Las determinaciones sanguíneas por lo general será el grado de recuperación de la función
revelan alteraciones metabólicas (hipoglicemia, hi- neuroló- gica. Esto depende de múltiples factores.
ponatremia, hipernatremia, y otros cambios electro- La causa del coma y la valoración de las zonas
líticos, alteraciones de la función renal, hepática, cerebrales afec- tadas posiblemente son los más
tiroidea o suprarrenal) o intoxicaciones (barbitúri-
importantes. Gradación del estado de
cos, morfina). La gasometría permitirá descartar la
presencia de hipoxemia, hipercapnia o cambios del coma
equilibrio acidobásico. El hemograma puede mos- Mucho se ha escrito con respecto a la posibilidad
trar anemia o leucocitosis sugestiva de sepsis. Las de establecer una gradación del estado de coma,
pruebas de la coagulación anómalas aclaran la cau- basa- da en las distintas características
sa de una hemorragia cerebral. neurológicas del paciente examinado. Se indica a
El ECG evidenciará la presencia de un IMA, arrit- continuación una clasificación aproximada en tal
mias y bloqueos. Si se sospecha una meningoence- sentido, tomada de Guillermann y col.
falitis o una hemorragia subaracnoidea que no tenga Coma I. Trastorno parcial de la conciencia en su
traducción imagenológica, se practicará una PL diag- contenido y en su reactividad. Cualitativa-
nóstica. mente obnubilación, confusión, estupor. EEG
La TAC es decisiva en la valoración del enfermo con reactividad conservada.
comatoso, especialmente cuando se sospecha una Coma II. Trastorno global de la conciencia
lesión expansiva. Debe recordarse que una TAC (coma propiamente dicho). Responde con mo-
normal no excluye la presencia de afecciones anató- vimientos estereotipados a estímulos nocicep-
micas como causa de coma, pues existen diversas tivos. EEG con reactividad escasa.
lesiones capaces de pasar por alto, tales como: in- Coma III. Trastorno global de la conciencia
farto hemisférico bilateral en fases iniciales, lesio- (coma “carus”). No responde a estímulos
nes pequeñas troncoencefálicas o de la fosa posterior, noci- ceptivos. Abolición de los reflejos
encefalitis, cizallamiento mecánico axonal debido a corneal y fotomotor. Inestabilidad de ritmo
traumatismo cerrado, trombosis del seno longitudi- respiratorio, vasomotora y térmica. EEG
nal superior, hematomas subdurales isodensos y au- arreactivo.
sencia de función cerebral secundaria a muerte Coma IV. Necesidad de métodos supletorios
encefálica. (respiración mecánica, drogas vasoactivas).
La angiografía es insustituible para el diagnósti- Hipotonía. Pupilas fijas. Si es de origen
co de aneurismas, malformaciones arteriovenosas, estruc- tural, equivale a la muerte cerebral.
oclusiones vasculares y otras lesiones; además, apor- EEG con silencio eléctrico.
ta detalles sobre anomalías en los casos susceptibles
de tratamiento neuroquirúrgico.
Tratamiento
El EEG no corrobora el diagnóstico en el coma, Cuidados iniciales del paciente en coma
excepto cuando se debe a crisis convulsivas no diag- Antes de demorarse en cualquier actitud diagnósti-
nosticadas clínicamente, encefalitis por virus del her- ca, hay que adoptar de inmediato una serie de
pes simple y en la enfermedad de Creutzfeld-Jacod. medi- das terapéuticas y de soporte vital:
No obstante, puede sugerir una encefalopatía meta-
1. Comprobar de forma rápida que el enfermo
bólica y suministrar información importante sobre
está en coma y no en un “seudocoma”, como
el estado de la corteza cerebral.
tras- torno psiquiátrico, tetraparesia de
cualquier causa o mutismo acinético.
508
2. Si es un traumatizado, ante la sospecha de una se repite hasta un total de 2 mg; si el enfermo
fractura de la columna cervical, se le debe in- no mejora, puesto que la vida media de las
movilizar, tomar las precauciones necesarias y, benzodiazepinas es mayor que la del flu-
si hace falta, intubarlo. mazenilo, se emplea una infusión de 0,1
3. Asegurar una ventilación adecuada: compro- a 0,4 mg/h. El flumazenilo también es útil en
bar que las vías aéreas están permeables y que el coma hepático, pero su uso en el coma
el enfermo respira de forma espontánea; si apa- etílico es controvertido.
rece apnea o hiperventilación, o si existe peligro 10. En el caso de traumatismo craneoencefálico,
de vómitos y el paciente no tiene conservados una vez que se logra la estabilidad
los reflejos de defensa de la vía aérea, proce- hemodiná- mica y respiratoria, si existe
der a la intubación y a la ventilación artificial fractura de crá- neo o signos focales
mecánica. neurológicos, se realizará una TAC craneal
4. Asegurar una vía venosa con suero glucosalino para detectar hematomas posibles de ser
isotónico y simultáneamente tomar muestra de evacuados; se iniciará, ade- más,
sangre para análisis. tratamiento antiedema cerebral.
5. Comprobar que el enfermo no sufre un colapso 11. Comenzar medidas generales de control de
circulatorio. En tal caso, tratarlo con volumen las constantes vitales y de cuidados de un
y drogas vasoactivas, según la causa de éste. enfer- mo inconsciente.
6. Realizar de inmediato una glicemia. Si esto no 12. Se debe remitir urgentemente al paciente a
es posible, administrar 40 ml de solución otro centro hospitalario, con una historia
glucosada al 50 %. El uso de glucosa en los clínica que brinde la máxima información,
pacientes con una lesión cerebral isquémica es si no se dispone de los medios de
muy controvertido; sin embargo, ante un coma diagnóstico y trata- miento de las posibles
de causa desconocida, parece más útil admi-
lesiones cerebrales cau- santes del estado de
nistrar glucosa, ya que el pronóstico del coma
coma (tomógrafo, Unidad de Cuidados
hipoglicémico es muy bueno cuando es tratado
Intensivos, Servicio de Neuroci- rugía, etc.).
con prontitud y, por el contrario, deja secuelas
permanentes si no se procede de inmediato.
Medidas generales del tratamiento
7. Si hay indicios de un síndrome de Wernicke
Una vez tomadas las medidas iniciales, hay que
(signos externos de malnutrición o sugestivos
ins- tituir el tratamiento específico de la situación
de alcoholismo u oftalmoplejía), adminis-
trar 100 mg de vitamina B1 (tiamina) por vía que provocó el coma, pero es lógico y además un
con- cepto básico, que cualquier estado de
parenteral. Dada la coexistencia de lesiones
reducción de la conciencia obligue a tomar una
multicarenciales en los alcohólicos, hay que
darles un complejo multivitamínico que inclu- serie de medidas comunes y generales, y son a
ya ácido nicotínico, pues si se usa sólo vitami- ellas a las cuales se hará referencia, dada la
na B1 y B6, puede empeorarse una pelagra con imposibilidad de explicar cada tratamiento
graves lesiones cerebrales. etiológico.
8. Si se sospecha una intoxicación por opiáceos 1. Hay que retirar los cuerpos extraños de la
(ambiente de procedencia del enfermo, marcas boca, hacer aspiración frecuente de las
de pinchazos, pupilas puntiformes, depresión secreciones respiratorias, administrar
respiratoria), emplear por vía parenteral de 0,4 oxígeno y realizar ventilación mecánica si es
a 1,2 mg de naloxona. Si la respuesta es positi- necesario.
va y el paciente recobra la conciencia, debe per- 2. Llevar un control estricto del balance hidromi-
manecer en observación, porque la vida media neral. Asegurar la circulación e hidratación
de la naloxona es más corta que la de la heroína. por vía parenteral.
9. Si se sospecha una intoxicación por benzodia- 3. Mantener una nutrición adecuada, preferente-
zepinas, se debe administrar flumazenilo en la mente por vía enteral (sonda nasogástrica).
dosis inicial de 0,3 mg, que de ser necesario 4. Control de los emunctorios: se inserta una
son- da de Foley en la vejiga con dispositivo de
reco- lección de orina estéril para realizar un
drenaje vesical continuo y cuantificar el
volumen
509
urinario. Ya se mencionó la sonda nasogástri- y mantener niveles de ventilación pulmonar
ca (para evacuar el estómago y para la nutri- aceptables en las distintas áreas. Los
ción). movimien- tos deben realizarse en bloques.
5. Protección ocular: los ojos deben mantenerse Friccionar la piel con alguna solución
cerrados y se instilará un colirio cada 6 u 8 h. protectora. Si se dis- pone de colchón
6. Control térmico. antiescaras, usarlo. Para evi- tar las
7. Posición del paciente y movilización: éste debe trombosis, la anquilosis y la atrofia
estar desnudo y se procurará que la sábana in- muscular por inactividad, se deben realizar de
ferior de la cama no tenga arrugas, ya que con forma metódica movimientos pasivos de los
gran facilidad y rapidez se producen excoria- miembros por 15 min cada 4 o 6 h, con espe-
ciones cutáneas. Deben indicarse inicialmente cial preferencia en los miembros inferiores.
los decúbitos laterales con cambios de posición 8. Evitar el uso de fármacos sedantes.
cada 2 o 3 h, para evitar las úlceras isquémicas 9. Tratamiento de la hipertensión endocraneal.
510
52
MIASTENIA GRAVE
Concepto plásmico; se liberan así las moléculas de acetilcoli-
na, de modo que se incrementa transitoriamente la
La miastenia grave es un trastorno de la trasmisión
concentración del neurotrasmisor en los receptores
neuromuscular debido a una disminución, de ori-
postsinápticos (nicotínicos). A esto sigue la despo-
gen autoinmunitario, del número de receptores de
larización de la membrana postsináptica, el poten-
acetilcolina en la placa motora, caracterizada por
cial de acción de la membrana muscular con
debilidad y fatiga muscular fluctuante, principalmen-
aumento de la concentración mioplasmática de
te de los músculos inervados por los pares cranea-
calcio y, por último, la contracción muscular. La
les, que se manifiesta durante la actividad continuada
acetilcolina es hidrolizada por la acetilcolinesterasa
y mejora tras el reposo y la administración de dro-
y se resintetiza a nivel presináptico por la
gas anticolinesterásicas. Evoluciona por lo general
colinacetiltransferasa
en forma progresiva o en brotes separados por re-
(Fig. 52.1).
misiones de duración variable. A. Normal B. Miastenia grave
La enfermedad no presenta predilección racial,
Vesíscula Axón
geográfica ni de edad, aunque es raro que ocurra en Sitio de Mitocondria
liberación
la primera década o después de los 70 años; la edad Nervio
de comienzo más frecuente es entre los 20 y los 30 Lámina terminal
basal
años. Antes de los 40 años es 2 veces más común en Receptores

la mujer; después de esta edad la incidencia es simi- Fibra ac-col

lar en ambos sexos. muscular Pliegues


funcionales
La frecuencia de enfermedades del tiroides u otras
afecciones autoinmunes entre enfermos y familia- Acetilcolinesterasa

res, es más elevada que en la población testigo. Fig. 52.1. Unión neuromuscular.
Se sugiere cierta predisposición genética por una
frecuencia desproporcionada de antígenos HLA-A1, La etiopatogenia de la miastenia grave es autoin-
HLA-B8 y HLA-DRW3 en pacientes menores de 40 mune, pues en más de un 90 % de los pacientes se
años y HLA-A3, HLA-B7 y HLA-DRW2 en los ma- encuentran anticuerpos contra los receptores de ace-
tilcolina que circulan en la sangre, así como dismi-
yores de 40. En los enfermos con timomas no existe
correlación con el HLA. nución del número de receptores en las placas
motoras.
Patogenia El complejo formado por la unión del anticuerpo
y el receptor, es englobado por una vesícula que
La unión neuromuscular o placa neural es el lugar
donde contactan el axón motor y la membrana muscu- forma la membrana sarcoplásmica. Al activarse el
lar y donde el potencial de acción de la fibra nervio- comple- mento, se destruye el complejo anticuerpo-
sa se trasmite a la fibra muscular. receptor. Como consecuencia de esto, los
Las terminaciones nerviosas poseen vesículas receptores de ace- tilcolina quedan bloqueados,
sinápticas de acetilcolina prestas a liberarse. El “internalizados” y de- gradados, por lo que su
potencial de acción despolariza la terminal presi- número disminuye; la membrana postsináptica se
náptica y aumenta la concentración de calcio axo- aplana y pierde sus plie- gues, el espacio de la
hendidura sináptica aumenta y

511
a causa de ello la acetilcolina tiene que atravesar por primera vez durante el embarazo o el
una mayor distancia en busca de su receptor y la puerperio, o como respuesta a drogas utilizadas
acetilcolinesterasa la degrada con más facilidad. durante la anes- tesia.
Se ignora cuál es el mecanismo desencadenante Los músculos oculares son los primeros en afec-
inicial de todo este proceso de respuestas autoinmu- tarse en un porcentaje importante de los casos y su
nes anómalas. Se cree que en el timo se producen toma está presente, por último, en más del 90 % de
falsos reconocimientos antigénicos de los recepto- los enfermos. La lesión de los músculos de la
res de acetilcolina de las células mioides contenidas mími- ca, masticación, deglución y el habla es la
en esta glándula, lo que ocasiona el desarrollo segunda en frecuencia. Juntas, la debilidad ocular
policlonal de linfocitos B que sintetizan anticuerpos y orofa- ríngea causan síntomas virtualmente en
contra múltiples estructuras de los propios recepto- todos los pacientes con miastenia, por lo que
res de estas células tímicas. La semejanza antigénica desde el punto de vista clínico la enfermedad se
de éstos con los receptores de acetilcolina de los concibe como una parálisis oculofaciobulbar
músculos estriados, provoca su ataque inmunitario. fluctuante. La debilidad del cuello y las
extremidades es también común, pero junto con la
La teoría del mimetismo molecular plantea que
de los músculos faciales. Casi nunca se afectan las
determinadas partículas de agentes, como el herpes
extremidades solas. En ellas, los múscu- los
simple, E. coli, Klebsiella pneumoniae y Proteus
proximales son más vulnerables, aunque no es
vulgaris, tienen cierta similitud antigénica con dife-
rara la adinamia distal y sí la afectación respiratoria
rentes porciones del receptor colinérgico. selectiva. En los casos más avanzados todos los
Se han comunicado datos que demuestran una músculos están debilitados, incluyendo diafragma,
alteración de la inmunidad celular, pero hasta el abdominales, intercostales y hasta los esfínteres ex-
momento no se ha identificado ningún defecto es- ternos de la vejiga y el recto.
pecífico. En términos de signos físicos, la ptosis
En alrededor de un 10 % de los pacientes afecta- palpebral, por toma del elevador del párpado
dos por la enfermedad, se producen hipo o hiperti- superior, es la ma- nifestación más frecuente; a veces
roidismo y en ellos es más frecuente la presentación unilateral (Fig. 52.2), otras bilterales (Fig. 52.3),
de otras enfermedades supuestamente autoinmunes, pero siempre más acen- tuada de un lado. A
como el lupus eritematoso, la artritis reumatoidea, diferencia de la ptosis por lesión del III par, por lo
la anemia perniciosa y la polimiositis. común no existe o es discreta la contracción
El timo es anormal en un 75 % de los casos (hi- compensadora del frontal.
perplasia en un 65 % y timomas en un 10 %). De La diplopia es un síntoma frecuente y suele ob-
aquellos con timomas, la mayoría tienen más de 50 servarse sobre todo con determinadas direcciones
años al comenzar la enfermedad. La distinción en- de la mirada; al comienzo es transitoria, pero de
tre la malignidad y benignidad de un timoma se rea- forma común se convierte en permanente.
liza por la existencia o no de invasión de los tejidos
circundantes. Es raro que los timomas ocasionen
metástasis fuera de la cavidad torácica.

Cuadro clínico
Lo característico de la miastenia es la existencia de
una fatigabilidad anómala que origina incapacidad
motora. Sobreviene con el esfuerzo, y el vigor se
recupera al menos de forma parcial, después del re-
poso muscular. La demostración de estos dos atri-
butos es suficiente para plantear el diagnóstico.
El comienzo habitualmente es insidioso, pero hay
casos de desarrollo bastante rápido, a veces iniciado
por un trastorno emocional o una infección (por lo
general respiratoria). Los síntomas pueden aparecer
Fig. 52.2. Ptosis palpebral unilateral en una paciente con
miastenia grave.
512
de la cara y la mímica resulta pobre; al enfermo le
es difícil silbar, sonreír y fruncir los labios.
En las extremidades cualquier grupo muscular
puede estar afectado, pero con mayor frecuencia
son los proximales, en ocasiones de forma
asimétrica.
La astenia braquial causa incapacidad para pei-
narse o afeitarse, mientras que la de las piernas da
lugar a caídas e imposibilidad de subir las esca-
leras.
La insuficiencia respiratoria, por agotamiento del
diafragma y de los músculos intercostales, no es
rara; es esta la manifestación clínica más grave y
temible. La naturaleza fluctuante de la falta de
fuerzas de la miastenia es diferente a cualquier
otra enferme- dad. Varía durante el día y es típico
que aumente con el paso de las horas, aunque hay
pacientes que presentan debilidad notable desde la
mañana. Las variaciones mayores y más
Fig. 52.3. Facie miasténica característica.
prolongadas son deno- minadas como
exacerbaciones o remisiones; cuan- do la
Las parálisis oculares y la ptosis se acompañan
exacerbación afecta los músculos respiratorios
habitualmente de debilidad del cierre de los ojos, hasta un punto tal que hace inadecuada la ventila-
combinación que se observa con regularidad sólo ción, se denomina crisis miasténica. No siempre la
en esta afección y en algunas variedades de la dis- adinamia es simétrica, sino que en ocasiones apare-
trofia muscular. ce en un hemicuerpo (generalmente el dominante)
La disfagia aparece al cabo de un rato de haber o
comenzado la deglución. Los pacientes se atragantan en grupos musculares aislados.
con facilidad y no es rara la parálisis del velo del Los síntomas aparecen o se agravan con el calor,
paladar, lo que motiva regurgitación nasal de los ali- la menstruación, la tensión emocional, la ingestión
mentos. Es característica la debilidad de los masete- de bebidas alcohólicas o de grandes cantidades de
ros con la consiguiente dificultad para la masticación; carbohidratos, las enfermedades intercurrentes y con
esto ocurre tras haber masticado cierto tiempo, lo el embarazo.
que obliga a los enfermos a comer con pausas (la Los hallazgos del examen neurológico dependen
dificultad para comer y deglutir suele originar con- de la distribución de los músculos afectados.
siderable pérdida de peso). La debilidad de estos Para poner en evidencia la fatigabilidad típica de
músculos no permite cerrar bien la boca, que queda la afección, se debe solicitar al enfermo que realice
entreabierta. una actividad continuada de los músculos oculares,
Las alteraciones de la fonación son típicas. Al faciales, de la masticación, deglución, fonación y
comienzo de la conversación la voz es normal y se de las extremidades, excepto en aquellos pacientes
va apagando progresivamente (por adinamia de las en los que la gravedad de la enfermedad no permite
cuerdas vocales y músculos laríngeos fonadores) y la mejoría ni siquiera en estado de reposo.
no es raro que adquiera un timbre nasal (por paráli- Los músculos debilitados se atrofian en un
sis asociada del velo del paladar). núme- ro limitado de casos y rara vez la atrofia es
Cuando se interesan los músculos cervicales, se impor- tante. La alteración de los reflejos tendinosos
produce caída de la cabeza hacia adelante, por lo es poco frecuente. No se afectan los músculos lisos
que el paciente debe mantenerla con la mano. ni el mio- cardio.
El trastorno miasténico en los músculos faciales A veces se describen parestesias en manos, cade-
determina la desaparición de los pliegues habituales ras y cara, pero no se acompañan de alteración sen-
sitiva objetiva.
Las demás funciones nerviosas están preservadas.
El psiquismo es normal o refleja depresión.
513
Formas clínicas ción de la placa motora terminal está reducida en
Grupo I: Miastenia ocular (15 a 20 %). Presenta de- un 20 % de lo normal.
bilidad limitada a los músculos oculares. Un escaso Electromiografía de fibra única. Normalmente,
número evoluciona al grupo II. Los autoanticuerpos dentro de una misma unidad motora existe una
antirreceptores son negativos o están presentes a lige- ra “desfase” entre el momento de aparición
bajos títulos. del po- tencial de acción de una fibra muscular y
el de la fibra contigua, debido a la leve variación
Grupo II: Miastenia generalizada. Puede ser: de la lon- gitud del axón que llega a una y a otra (a
• A: Ligera. Comienzo lento con compromiso de este fenó- meno se le llama jitter). Con un
los músculos oculares y del tronco; respeta la
electrodo especial pueden obtenerse estos dos
musculatura bulbar y respiratoria. Tiene buena
potenciales. Cuando exis- te la enfermedad, la
respuesta a los anticolinesterásicos. Crisis poco
aparición del 2do. potencial se retrasa (valor
frecuentes. Baja mortalidad.
normal de 50 ms) o incluso a veces no aparece
• B: Moderada. Toma los músculos bulbares y la
musculatura rizomélica. No afecta los múscu- (fenómeno denominado blocking). Aunque no es
los respiratorios. Mala respuesta a los anticoli- patognomónico, sí es muy sugestivo. Es una
nesterásicos. Crisis frecuentes. prueba muy sensible con un índice de positividad
de un 95 %, aun en músculos clínicamente no afec-
Grupo III: Miastenia aguda fulminante. Evolución tados, y no se normaliza con el tratamiento.
muy rápido con compromiso inicial de la muscula- Reflejo estapedial. Consiste en aplicar un
tura bulbar, empeoramiento precipitado (6 meses). estímulo sobre la membrana timpánica durante 10 s
Alto porcentaje de timomas. Pobre respuesta a los a frecuen- cias entre 50 y 1 000 Hz, con lo cual
anticolinesterásicos. Alta incidencia de crisis. Alta
aumenta la tensión del músculo del estribo. En las
mortalidad.
personas nor- males se mantiene una respuesta
Grupo IV: Miastenia severa tardía. Pacientes con 2 constante, pero en los miasténicos se agota la
o más años de evolución de un grupo I o II que su- respuesta y mejora tras la administración de
fren empeoramiento progresivo considerable. Alta Tensilón.
incidencia de timomas. Generalmente se inicia des- Electromiografía estándar. Usualmente es
pués de los 50 años. Rebelde al tratamiento con an- normal, pero de manera ocasional muestra un
ticolinesterásicos. Tiene una elevada mortalidad. patrón miopático y casi nunca deja ver signos de
Grupo V: Miastenia con atrofia muscular. Pacientes desnerva- ción, a menos que otra condición esté
que comienzan con un tipo I o II y al cabo de 6 me- superpuesta. De forma similar, la velocidad de
ses inician con atrofia de los músculos afectados. condución ner- viosa es normal.
Exámenes complementarios
Test de estimulación repetitiva. La anormalidad Dosificación de anticuerpos
electrodiagnóstica característica es una reducción a. Anticuerpos antirreceptores de acetilcolina. Su
progresiva de la amplitud de los potenciales de ac- producción constituye una condición fisiopatológica
ción musculares por estimulación nerviosa repetitiva básica de la enfermedad. Se encuentran en el 90 %
a baja frecuencia (3 a 5 Hz) . Se considera positiva de los casos del grupo II y en el 70 % de los del
la prueba si la amplitud del 5to. potencial es un 10 % grupo I. La seronegatividad no excluye el diagnós-
menor que el 1ro. (reacción miasténica de Jolly). En tico. En un mismo paciente suelen existir varios ti-
la miastenia grave generalizada, la respuesta dis- pos de anticuerpos dirigidos contra diferentes
minuida se demuestra en cerca de un 90 % de los porciones del receptor. Su título no guarda relación
casos, si al menos se exploran 3 sistemas músculo– con la gravedad de la enfermedad y a veces persis-
nervio. En pacientes con miastenia ocular pura, la ten en personas que hacen remisión clínica.
sensibilidad de la prueba es menor de un 50 %. b. Anticuerpos antimúsculo estriado. Se hallan
En estudios con microelectrodos en los músculos en un 30 % de los enfermos; se observan en un 90
intercostales, la amplitud de los potenciales de ac- % de los pacientes con timomas. Son los
responsables de la necrosis tumoral.
c. Anticuerpos anticanales del calcio. Se
encuen- tran en ocasiones asociados a anticuerpos
antirre-
514
ceptores de acetilcolina en pacientes con el síndro- • Debilidad de los músculos de los brazos al
me de Eaton–Lambert. mantenerlos horizontales en abducción
Otras alteraciones serológicas encontradas con duran- te 1 min.
una frecuencia variable, son la presencia de anticuer- • Debilidad de la musculatura proximal de los
pos antinucleares, antitiroideos, anticélula parietal miembros inferiores al subir escalones o reali-
gástrica y factor reumatoideo. Existen evidencias clí- zar cuclillas.
nicas o de laboratorio de hipertiroidismo en algún
momento de la enfermedad en un 5 % de los pa- La inyección de un agente anticolinesterásico
cientes. que produce mejoría de los síntomas es otro
La radiografía de tórax, el neumomediastino, la
elemento confirmatorio. Esto corresponde a las
TAC y la RMN del mediastino, pueden revelar la
pruebas far- macólogicas que son las sguientes:
exis- tencia de timomas o un timo prominente,
especial- mente en los enfermos mayores de 50 • Prueba del edrofonio (Tensilón). Es un antico-
años. Diagnóstico linesterásico de acción rápida y corta
Diagnostico positivo (ámpulas de 10 mg y bulbos de 100 mg en
En los pacientes que tienen la típica facies miasténi- 10 ml). Se inyectan 2 mg EV y se valora la
ca (cabeza colgante, ojos semicerrados, parálisis fuerza muscu- lar; si no hay respuesta en 30
oculomotora, inexpresividad, imposibilidad para reír s, se da una se- gunda dosis de 3 mg y si
y babeo) el diagnóstico es evidente, pero sólo una tampoco hay respuesta, se administra el resto
minoría de los casos se presentan en este estadio de del ámpula (dosis total de 10 mg). Sus
la enfermedad. La ptosis palpebral, diplopia, difi- efectos se inician entre 30 y 60 s y duran de 4
cultad para hablar o tragar y debilidad de los miem- a 5 min. Se prefiere cuando se examinan los
bros son al principio leves e inconstantes. músculos craneales porque la res- puesta es
El diagnóstico ha de sospecharse ante los siguien- espectacular.
tes elementos: • Prueba de la prostigmina (neostigmina). Éste
es un agente de acción prolongada, por lo que
• Paresia de músculos oculares sin toma pupilar, es más útil para evaluar la fuerza de las extre-
variable en el tiempo. midades. Se administra 1,5 mg IM (ámpulas
• Sintomatología bulbar de reciente aparición. de 0,5 mg) combinado con 0,5 mg de atropina
• Debilidad de las extremidades sin arreflexia ni (para evitar los síntomas muscarínicos). Apa-
amiotrofia. rece mejoría a los 15 o 20 min, la cual es
• Fatigabilidad ante el esfuerzo de un grupo máxi- ma a los 30 min y dura de 2 a 3 horas.
muscular específico.
• Insuficiencia respiratoria sin explicación clara. El retorno de la fuerza a los músculos débiles
Desde el punto de vista clínico, son útiles las si- ocurre uniformemente después de la inyección de
guientes pruebas para poner de manifiesto la un anticolinesterásico. Si tal respuesta no sucede, el
debili- diagnóstico de miastenia debe dudarse. Demostrar
dad muscular: la respuesta farmacológica siempre es difícil; de to-
das formas, si las características clínicas son suge-
• Mirar al techo durante 1 o 2 min (se observa la rentes, las pruebas pueden repetirse. Las respuestas
caída del párpado). falsas positivas al edrofonio son raras.
• Aparición de diplopía durante la lectura. La prueba del curare es totalmente
• Fatigabilidad de los músculos temporales y ma- desaconsejable, ya que es capaz de producir
seteros durante la masticación.
insuficiencia respira- toria.
• Contar en voz alta (a medida que habla, la voz
se apaga).
Diagnóstico diferencial
• Aparición de voz débil y nasal durante la con-
El diagnóstico diferencial dependerá de los múscu-
versación.
los afectados y se expone en el cuadro 52.1.
515
CUADRO 52.1 mortalidad es rara. La timectomía es
ENFERMEDADES CON LAS QUE HAY QUE HACER
EL DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
parcialmente efectiva.
DE LA MIASTENIA GRAVE 3ra. fase. Después de 14 años de evolución. La
progresión es mínima. La debilidad
1. Miastenia ocular: muscular persiste con atrofias muscu-
A. Miopatías oculares. lares y escasa respuesta a los anticoli-
• Oftalmoplejía externa progresiva. nesterásicos.
• Distrofia oculofaríngea.
• Miopatías mitocondriales.
• Oftalmoparesias supranucleares. Las remisiones espontáneas son más frecuentes
B. Parálisis de los oculomotores. en los 2 primeros años (25 a 30 %).
• Neuritis del III, IV y VI pares craneales de dife- El curso es impredecible; así, en determinados
rente causa.
• Síndrome del seno cavernoso.
momentos y ante situaciones de stress, hay un em-
• Lesión mesocefálica vascular (Weber-Wallemberg) peoramiento relativamente brusco (crisis miasténi-
de otra causa. ca) y en otros aparecen episodios de debilidad por
2.Forma bulbar: intoxicación medicamentosa (crisis colinérgica).
• Esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
• Síndrome seudobulbar.
Tratamiento
• Miopatía bulbar aguda del hipertiroidismo. El médico dispone de 5 tipos de tratamiento:
3. Forma de miembros: drogas anticolinesterásicas, plasmaféresis,
• Neurastenia.
• Polimiositis. corticosteroides, timectomía y drogas
• Botulismo. inmunosupresoras. Las tres úl- timas pueden alterar
• Intoxicación por organofosforados. el curso de la enfermedad. Para su elección deben
• Síndrome de Guillain-Barré. considerarse factores tales como: severidad de la
• Síndrome de Eaton Lambert.
afección, repercusión sobre las acti- vidades, sexo,
• Parálisis discaliémicas.
4. Miopatías metabólicas adquiridas (hipertiroideas). edad, estado general, enfermedades concurrentes,
5. Distrofias musculares (cuando la miastenia cursa con inteligencia y grado de cooperación y confianza del
atrofias). paciente. El plan de tratamiento para cada persona
6. Miastenia aguda fulminante: necesita ser individualizado y cons- tantemente
• ELA.
• Déficit de maltasa ácida (glugenosis tipo II). modificado para optimizar los beneficios
• Parálisis por picadura de garrapatas. terapéuticos.
Se acepta de manera general que el tratamiento
con anticolinesterásicos debe iniciarse tan pronto
Evolución como se realice el diagnóstico. Constituye la base
del tratamiento sintomático. Al aumentar la dispo-
La enfermedad tiene habitualmente un comienzo
nibilidad de acetilcolina, se favorece la trasmisión
lento y una evolución a lo largo de semanas o meses
neuromuscular. Los más utilizados son:
con síntomas que aparecen y persisten, que aumen-
prostigmina
tan o incluso desaparecen para ser sustituidos por
(Neostigmina), piridostigmina (Mestinón) y ambe-
otros; pero también tiene un comienzo agudo y una
monium (Mytelase). Provocan efectos secundarios
evolución más rápida.
por acción muscarínica (lagrimeo, sialorrea, aumento
Algunos autores describen 3 fases evolutivas:
de las secreciones bronquiales, bradicardia,
1ra. fase. Incluye los primeros 5 a 7 años después
hipoten- sión arterial e incremento de la motilidad
del inicio de la enfermedad; es la más
intestinal y ureteral) y en ocasiones inducen (por
lábil y en ella ocurre el mayor número
sobredosis) un bloqueo neuromuscular por
de remisiones y de muertes. En esta fase
despolarización man- tenida de la membrana
la timectomía es más efectiva.
postsináptica (crisis colinér- gica). Los efectos
2da. fase. Comprende los segundos 7 años. Se ca-
adversos son iguales para los tres medicamentos,
racteriza por una lenta progresión con
pero menos marcados con la piridos- tigmina. El
cierta tendencia a la estabilidad. La
tratamiento con ésta se inicia usualmen- te con una
tableta (60 mg) cada 8 h. En dependencia de la
respuesta clínica, la dosis se aumenta (primero
516
disminuyendo el intervalo entre las dosis y luego diario EV durante 5 días vigilando la glicemia, ten-
incrementando la cantidad que se va a administrar sión arterial, capacidad vital y los electrólitos. Se
por toma), pero no deben esperarse ya mejorías cuan- utilizará conjuntamente 1,5 g de gluconato o lactato
do haya que usar dosis superiores a 120 mg cada 2 de calcio y un antagonista H2 (cimetidina). Luego
h. Si el paciente tiene especialmente debilidad mati- se continúa con prednisona por vía oral, a
nal, se le indica al acostarse 1 tableta de liberación razón de 80 mg diarios, que se disminuyen de
sostenida de 180 mg. No existen evidencias de que forma progresiva. Otros autores sugieren comenzar
alguna de estas drogas sea mejor que la otra, ni tam- con 15 o 20 mg diarios de prednisona y aumentar 5
poco que su combinación sea más efectiva que su mg cada 2 o 3 días hasta lograr la mejoría clínica,
empleo aislado. Tienen limitaciones: en la miastenia o una do- sis de 50 mg diarios, que se mantiene
ocular puede mejorar la ptosis, pero suele persistir por 1 a 3 me- ses y se modifica de forma gradual a
algún grado de diplopia; en la forma generalizada el un régimen de días alternos hasta alcanzar 100 mg
paciente casi siempre mejora de forma significativa, cada 48 h. No existen criterios uniformes sobre la
pero algunos síntomas comúnmente se mantienen. duración del tra- tamiento. Se inicia una
Los corticosteroides tienen efecto beneficioso reducción paulatina de la dosis una vez que se
entre 70 y 100 % de los casos; la mejoría comienza alcanza una mejoría estable, para intentar
en 2 a 4 semanas y es máxima entre los 6 meses y 1 suprimirlo al cabo de 18 a 24 meses, aunque en
año. Su asociación con los anticolinesterásicos ocasiones esto no es posible y es necesario continuar
permite la disminución e incluso la supresión de la con dosis bajas de mantenimiento por un tiempo
dosis de estos últimos. Están particularmente indi- más prolongado o indefinidamente.
cados en: De los inmunosupresores, el más utilizado es la
1. Pacientes con timomas en su preparación qui- azatioprina en dosis de 2 a 3 mg/kg de peso/día; la
rúrgica. mejoría tarda semanas en aparecer. Están
2. Cuando la respuesta a los anticolinesterásicos indicados:
no es buena. 1. En los casos severos que no responden a otros
3. Cuando se retrasan los efectos beneficiosos de tratamientos.
la timectomía. 2. En los que precisan altas dosis de
4. Cuando no se obtienen beneficios con otros tra- mantenimien- to de esteroides.
tamientos. 3. Cuando están contraindicados los esteroides.
4. Al finalizar un ciclo de plasmaféresis (para
Los principios generales que rigen su uso son: evi- tar fenómenos de rebote).
1. Deben utilizarse precozmente.
2. Dar desde el inicio dosis altas resulta más be- Se recomienda la inmunización anual contra la
neficioso que su aumento progresivo. influenza, así como la vacunación antineumocócica
3. En ancianos con diplopia y ptosis es posible antes de iniciar el tratamiento inmunosupresor.
que sean más efectivos que los anticolinesterá- La gammaglobulina se emplea a razón de 400
sicos. mg/kg de peso/día durante 5 días; se observa
4. Una exacerbación relativamente rápida de la mejoría entre el 3ro. y el 5to. días, que persiste
debilidad ocurre en algunos casos al inicio del durante 1 a 3 me- ses. Su mecanismo de acción es
tratamiento con altas dosis. desconocido. Está indicada en:
5. La mayor limitante del tratamiento prolongado 1. Fase aguda grave o crisis miasténica.
es la presencia de reacciones indeseables. 2. Pacientes refractarios a otros tratamientos.
6. La disminución muy rápida de la dosis a veces 3. Para inducir mejorías rápidas en el preopera-
exacerba la debilidad. torio.
4. En la agravación por cualquier causa.
En pacientes con debilidad significativa de los
miembros, orofaríngea o insuficiencia respiratoria, Tiene como inconveniente su alto costo. Los
se recomienda administrar 1g de metilprednisolona efec- tos adversos incluyen: escalofrío, fiebre y
cefalea. Puede aparecer insuficiencia renal en
pacientes con daño renal previo y en aquellos
con déficit de
517
inmunoglobulina A a veces se produce una reac- roides suelen ser efectivos. Vigilar el desarrollo de
ción anafiláctica y también la trasmisión de la hepa- cataratas. La timectomía, plasmaféresis y la gam-
titis B. maglobulina son menos efectivas y deben conside-
La plasmaféresis produce mejorías rápidas y es- rarse sólo si el tratamiento con corticoides es
pectaculares que duran desde 3 a 4 semanas hasta inefectivo o está contraindicado.
varios meses e incluso años. Su mecanismo de ac- Miastenia generalizada. En menores de 60 años,
ción no es del todo conocido, ya que aunque se creía los inhibidores de la acetilcolinesterasa son los pri-
inicialmente que eliminaba los anticuerpos, se de- meros que deben usarse como tratamiento sintomá-
mostró que el título de éstos podía ascender tras el tico. En esta variedad está indicada la timectomía.
tratamiento a valores similares a los previos, sin que En pacientes con progresión de la debilidad de las
reaparezcan las manifestaciones clínicas. Tiene igua- extremidades, con o sin debilidad bulbar y respira-
les indicaciones que la gammaglobulina y, además, toria, es probable que sea necesario el empleo de
el tratamiento de la miastenia neonatal severa. Se esteroides o plasmaféresis en el período preoperatorio.
recomienda realizar varias sesiones hasta recambiar Miastenia generalizada en mayores de 60 años.
un volumen plasmático de unos 10 a 12 L. Los inhibidores de la acetilcolinesterasa
La timectomía trastorácica con exploración del constituyen la primera elección. La timectomía no
mediastino anterior, constituye en la actualidad el se conceptúa de primera línea y hay que
eje central del tratamiento; se sustenta su uso en la considerar cuidadosa- mente el uso de
eliminación del principal mecanismo inmunológico
corticosteroides u otro inmunosu-
anómalo inductor de la enfermedad. Está indicada
presor.
en todos los pacientes desde la pubertad hasta los 60
Miastenia seronegativa. Ocurre de forma aproxi-
años y se debe realizar lo más precozmente posible
mada en un 10 a 15 % de los pacientes, por lo
(con preferencia en los 2 primeros años). La res-
puesta beneficiosa varía tanto en el tiempo (aparece gene- ral jóvenes, del sexo masculino, sin timoma;
entre el 1ro. y el 5to. año posterior a su realización) en un pequeño número de casos hay hiperplasia
como en el grado. Esto dependerá de la severidad tímica, pero en la mayoría el timo es normal,
clínica (mejor pronóstico cuanto mejor sea la situa- atrófico o involucionado. El cuadro clínico y los
ción clínica), duración de la enfermedad (mejor pro- exámenes complementarios son similares a los de
nóstico si es precoz), edad y sexo (mejor respuesta los enfer- mos con anticuerpos positivos y el
en mujeres jóvenes) e histología del timo (en los tratamiento es el mismo.
casos de timoma la respuesta suele ser más pobre). Miastenia inducida por D-penicilamina. La de-
En los pacientes con una forma ocular de 1 año o bilidad en estos casos es pequeña y confinada a los
más de evolución, el proceder por lo general se con- músculos oculares. Si se suprime el uso del
sidera innecesario, a menos que exista un timoma. fármaco y se administran inhibidores de la
Antes de la timectomía, el enfermo debe estar lo colinesterasa, es posible mejorar esta condición; si
más compensado posible y, de ser factible, asinto- los síntomas per- sisten, los pacientes se tratarán
mático. Los anticolinesterásicos, si se estaban utili- como si padecieran una miastenia autoinmune.
zando, se suspenderán en las 12 a 24 h previas y se
reinicirán 24 a 48 h después (para evitar los efectos Formas especiales de miastenia grave
muscarínicos secundarios e impedir una potenciación Sólo se hará una breve referencia a ellas.
colinérgica). Después se disminuirá la dosis de ma- Miastenia neonatal: Cerca del 12 % de los nacidos
nera controlada a la mínima necesaria para mante- de madres miasténicas tienen un síndrome típico
ner al paciente sin síntomas. Este proceder es el que
ca- racterizado por deterioro de la succión, llanto
conduce a un mayor número de mejorías y remisio-
débil, miembros flojos y algún grado de
nes de la enfermedad.
insuficiencia respi- ratoria. Los síntomas comienzan
A continuación se exponen algunas pautas tera-
en la primeras 48 h y continúan varios días o
péuticas específicas, según el tipo de miastenia:
semanas, después de los cuales los niños se
Miastenia ocular. Iniciar el tratamiento con un
normalizan.
anticolinesterásico. Si no existe mejoría, los este-
Miastenia congénita: Es rara. Las madres son
asin- tomáticas y no tienen anticuerpos
antiacetilcolina circulantes. Usualmente no ocurren
problemas en el
518
período neonatal; en cambio, la oftalmoplejía es el la infección y las reacciones a fármacos.
signo dominante durante la infancia. Los principios del tratamiento son los mismos de
Miastenia inducida por drogas: El mejor ejem- la insuficiencia respiratoria en general. Una vez
plo de esta condición ocurre en los pacientes que que se intuba y ventila al paciente, se recomienda
reciben tratamiento con D–penicilamina, ya referido. sus- pender la medicación con drogas
Crisis miasténica anticolinesterási- cas, ya que muy rara vez estas
crisis obedecen a una dificultad en la medicación
El desarrollo en forma más o menos brusca e inten- y a que la eficacia de estos fármacos para sacar al
sa de síntomas de miastenia grave resistente a la enfermo de las crisis es limitada e, incluso, no es
medicación anticolinesterásica, se denomina crisis raro observar una resisten- cia a ellos. Esta
miasténica. Ocurre con más frecuencia en pacientes práctica, además, evita cuestiones como la dosis
con disartria, disfagia y debilidad documentada de idónea o la estimulación colinérgica de las
los músculos respiratorios. Es la forma de debut secreciones pulmonares.
en 8 % de los casos. El tratamiento anticolinesterásico se restablecerá
Su desarrollo está condicionado tanto por facto- de forma paulatina cuando la fiebre u otros signos
res endógenos como exógenos; de ellos, los más de infección mejoren, no existan complicaciones
importantes son: infecciones (sobre todo respirato- pulmonares y el paciente respire sin asistencia.
rias), stress, ejercicio, embarazo, parto, fármacos, La determinación de si la plasmaféresis o las in-
exposición prolongada al calor, operaciones (inclu- munoglobulinas EV acortan la duración de las cri-
yendo la timectomía) y rara vez por abandono del sis, requiere de estudios controlados. Algunos
tratamiento, irregularidad o dosis insuficiente de éste autores sugieren altas dosis de esteroides.
(menos de un 5 %). La eficacia de las Unidades de Cuidados Intensi-
vos pulmonares es ahora tan buena, que las crisis
FÁRMACOS DE USO LIMITADO casi nunca son fatales y muchos de los pacientes
remiten.
EN EL PACIENTE MIASTÉNICO
Crisis colinérgica
• Relajantes musculares: curarizantes, despolarizantes,
La crisis colinérgica (rara) consiste en un aumento
benzodiazepinas, baclofeno.
• Antibióticos: aminoglucósidos, polipéptidos, tetraci- de la debilidad producida por la administración de
clinas, lincomicina, clindamicina. una dosis excesiva de un anticolinesterásico. Se
• Antipalúdicos: quinina, cloroquina. acompaña de cólicos abdominales, diarreas, lagri-
• Fármacos cardiovasculares: quinidina, procainamida, meo, salivación, secreciones bronquiales excesivas,
gangliopléjicos,  bloqueadores, reserpina.
• Analgésicos: opiáceos, dipirona magnésica. bradicardia, hipotensión, miosis, calambres muscu-
• Antirreumáticos : D-penicilamina, colchicina. lares y fasciculaciones. A menudo es difícil su dife-
• Hormonas: tiroides, oxitocina. renciación con una crisis miasténica. En este caso
• Psicotropos: tranquilizantes, ansiolíticos, antidepresi- puede ser útil la prueba del Tensilón: con un exceso
vos, neurolépticos.
• Anticolinérgicos. de anticolinesterásico no se producirá mejoría nin-
• Antihistamínicos. guna, en realidad el estado del paciente a veces em-
• Diuréticos que depleten potasio. peora. Cuando la diferenciación de la crisis no está
clara o es producida por una dosis excesiva de anti-
Se caracteriza por una crisis de debilidad aguda colinesterásicos, está indicada la suspensión de es-
en la que el paciente requiere asistencia ventilatoria, tos medicamentos y un enérgico apoyo respiratorio.
alimentación artificial o ambas y que generalmente Se suele administrar atropina con el fin de amorti-
persiste por días o semanas. La meta terapéutica es guar algunos efectos colaterales de tipo
mantener las funciones vitales y evitar o tratar las muscarínico. Cuadros seudomiasténicos
infecciones hasta que el enfermo de forma espontá-
nea se recupere. producidos por afecciones de la unión
Se deben identificar y tratar los factores precipi- neuromuscular
tantes, como las alteraciones tiroideas, el embarazo, Síndrome de Eaton-Lambert. Es una enfermedad
autoinmune de las sinapsis colinérgicas periféricas,

519
donde los autoanticuerpos son dirigidos contra las toria, y el tratamiento es de soporte ventilatorio.
“puertas de voltaje” de los canales del calcio en las Botulismo. Se caracteriza por una parálisis total
terminaciones nerviosas. En los adultos el 60 % de de la trasmisión colinérgica muscarínica y
los pacientes tienen un carcinoma de células peque- nicotínica, causada por la toxina botulínica al
ñas del pulmón. La anomalía de la neuroconducción actuar sobre los mecanismos presinápticos de
se debe a una liberación inadecuada de acetilcolina. liberación de acetil- colina en respuesta a la
Se caracteriza por debilidad muscular de la cintura estimulación nerviosa. El espectro clínico oscila
pélvica y de los músculos proximales de las extre- entre la sintomatología gas- trointestinal aguda
midades inferiores. Los músculos extraoculares no sin signos de disfunción neuro- lógica y la
se afectan y la fuerza muscular mejora con el ejerci- cuadriplejía fláccida. El tratamiento es de
cio repetitivo. El electromiograma muestra un au- sostén y la administración de la antitoxina
mento del potencial de acción del músculo a medida botulínica.
que se repiten los estímulos (tal vez la estimulación Cuadriplejía miopática aguda por corticosteroi-
repetitiva del nervio facilite la liberación de acetil- des. Se han reportado más de 30 casos tras el trata-
colina). El tratamiento está dirigido contra el proce- miento con grandes dosis de esteroides. En el 90 %
so tumoral; también se utilizan fármacos que ayuden de ellos también se usaron agentes bloqueadores no
a la liberación de acetilcolina. despolarizantes; ninguno padecía de enfermedad
Bloqueo neuromuscular inducido por antibióti- neuromuscular. Estos pacientes presentaron una
cos. Los aminoglucósidos y los antibióticos polipep-
cuadriplejía severa con atrofia muscular entre 4
tídicos pueden causar un bloqueo sintomático de la
días y 2 semanas después de comenzar el
trasmisión neuromuscular en pacientes sin enferme-
dad neuromuscular conocida. El bloqueo aparece tratamiento esteroideo. La debilidad era
cuando los niveles sanguíneos de los fármacos son primariamente proxi- mal o distal y luego difusa.
muy altos, como ocurre en enfermos con insuficien- La debilidad persistente de los músculos
cia renal, aunque no siempre es así. Se cree que se respiratorios dificultó el desacople de la ventilación
produce una liberación inadecuada de acetilcolina; mecánica. De manera aproximada la mitad de los
adicionalmente, la sensibilidad de la membrana casos volvió a la normalidad. Los estudios de
postsináptica a la acetilcolina está disminuida. La conducción nerviosa y la electromiogra- fía
manifestación más frecuente es la apnea posopera- dieron resultados normales, miopáticos o
neuropáticos.
520
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523
Quinta Parte

INTOXICACIONES
Y ENFERMEDADES POR AGENTES
FÍSICOS
53
INTOXICACIONES EXÓGENAS
Las intoxicaciones por medicamentos, drogas de do aparecen síntomas clínicos tras una exposición
abuso y productos domésticos o industriales, tienen reciente a una dosis potencialmente tóxica de una
una historia bastante reciente, aunque existen noti- sustancia química.
ficaciones de intoxicaciones o envenenamientos des-
de hace miles de años. No es hasta la década de los Cuadro clínico
años 50 del siglo pasado donde se comienzan a re- La anamnesis tiene extraordinaria importancia en el
conocer las intoxicaciones agudas como un proble- diagnóstico de las intoxicaciones agudas, proceder
ma inherente a las urgencias médicas. que se realizará una vez resuelta cualquier altera-
Desde el punto de vista cronológico existen va- ción emergente. Debe tratarse que los testigos per-
rios acontecimientos que guardan relación con el
manezcan presentes, ya que están en posición de
nacimiento de la toxicología clínica. En 1952, la
ofrecer valiosos datos acerca del origen de la in-
American Academy of Pediatrics organizó el Acci-
toxicación.
dent Prevention Committee con el propósito de de-
Siempre será necesario averiguar los siguientes
terminar los accidentes en los niños y encontraron que
el 50 % de los casos estaban relacionados con tóxi- datos:
cos. En 1953 apareció el primer centro de informa- • Nombre del medicamento o de la sustancia quí-
ción toxicología en Chicago, y así sucesivamente se mica.
desarrollaron en los Estados Unidos alrededor de un • Cantidad aproximada a que se expuso el
centenar de instituciones y organizaciones que me-
pacien- te. Número de tabletas o mililitros de
joraron la asistencia al intoxicado. De la misma for-
líquido ingeridos.
ma se crearon servicios de atención a este tipo de
• Tiempo transcurrido desde la exposición.
pacientes en diferentes hospitales, que han mejora-
do su asistencia en los últimos años. • Presencia de vómitos previos, ya que esto pue-
En nuestro país existen dos centros de informa- de indicar la eliminación de una parte del tóxi-
ción toxicológica; uno de ellos es el Centro Nacio- co, el riesgo de broncoaspiración, o ambos.
nal de Toxicología en Ciudad de La Habana, y el • Consumo habitual de algún medicamento.
otro radica en la ciudad de Santiago de Cuba. Am- • Existencia de otras personas con los mismos
bos desarrollan planes asistenciales, docentes y de sín- tomas (familiares, compañeros de estudio
investigación. o de trabajo).

Concepto de tóxico y de intoxicación De todas formas, en más del 30 % la


aguda información no es confiable por desconocimiento,
falta de nivel cultural, mentira deliberada o falta de
Se define como tóxico a cualquier sustancia quími- testigos.
ca que sea capaz de producir la muerte, heridas u
Todo médico debe sospechar una intoxicación o
otros efectos perjudiciales en el organismo. Los sín-
establecer un diagnóstico diferencial con ésta, cuando
tomas y signos resultantes de la acción de un tóxico
no exista otra causa que justifique un cuadro clínico,
sobre el organismo se denominan intoxicación, y se
o en las siguientes circunstancias: casos psiquiátri-
considera que existe una intoxicación aguda cuan-
cos, traumatismos de cráneo, coma desconocido en
jóvenes, arritmias graves en jóvenes sin enfermedad

527
previa, y en la acidocis metabólica persistente de 2. Dolor y ulceración de la boca y orofaringe.
causa desconocida. Características de los álcalis y ácidos.
El conocimiento de las manifestaciones clínicas 3. Hematemesis. Frecuente en la intoxicación
es otra de las bases de un diagnóstico y valoración por anticoagulantes orales, posible tras la
correctos, por lo que se describirán algunos sínto- ingestión de hierro y menos común en la de
mas y signos que aparecen en la evolución de estos antinflama- torios no esteroideos
pacientes, así como algunas de las sustancias tóxi- 4. Íctero. En fases avanzadas de la intoxicación
cas capaces de producirlos. por paracetamol, hongos hepatotóxicos y en la
intoxicación por fósforo.
Manifestaciones respiratorias 5. Íleo paralítico. Ingestión de anticolinérgicos,
1. Broncospasmo. Por irritación directa de la vía antidepresivos tricíclicos y fenotiacinas.
aérea (gases irritantes), por efecto farmacoló- 6. Náuseas y vómitos. Síntomas comunes de mu-
gico (organofosforados), o por hipersensibili- chas intoxicaciones, producto de irritación gás-
dad. trica o a consecuencia de estímulos sobre el
2. Cianosis. De causa central en todas las situacio- SNC. Por su frecuencia en causarlos se desta-
nes donde exista hipoventilación (sin hipoxe- can la digital, la teofilina, el borato y las sales
mia en los pacientes con metahemoglobinemia). de oro.
3. Edema del pulmón no cardiogénico. Ocurre en 7. Sequedad de la boca. Se debe destacar la res-
diferentes intoxicaciones, a veces sin poder piración oral o la deshidratación por vómitos
aclarar su verdadero mecanismo de producción. u otras pérdidas. Ocurre con cualquier
Entre otros, inducen los gases irritantes y los compues- to que tenga actividad
organofosforados. anticolinérgica o con los antihistamínicos.
4. Hiperventilación. Característica de la intoxi- 8. Sialorrea. En la intoxicación por organofosfo-
cación por salicilatos, pero que la ocasionan rados y carbamatos.
también estimulantes del SNC, cianuro, CO, y
a veces simplemente la ansiedad. Manifestaciones neurológicas
5. Hipoventilación. La hipoxia en el curso de una 1. Agitación, delirio o psicosis. Es posible
intoxicación ocurre por algunos de los meca- encon- trarlos tras la intoxicación por
nismos siguientes: sustancias anticolinérgicas, antihistamínicos,
a) Respirar con poco oxígeno cuando en un es- CO, anfeta- minas, cocaína, LSD, teofilina,
pacio cerrado hay gases inertes que despla- glucocorticoi- des, etc.
zan a aquél. 2. Acufenos. Típico de la intoxicación salicílica
b) Dificultad para la difusión pulmonar de oxí- cuando los valores plasmáticos superan los 40
geno. Secundaria a neumonía y edema agu- a 50 mg %.
do del pulmón. 3. Convulsiones. Constituyen un buen índice de
c) Hipoxia celular, que aparece por dificultad gravedad, aunque a veces resultan poco orien-
en el transporte de O2 por la hemoglobina tadoras. Las causan los antidepresivos tricícli-
(carboxihemoglobina, metahemoglobina). cos, teofilinas, anfetaminas, inhibidores de la
monoaminoxidasa, cocaína, isoniacida, estric-
Manifestaciones digestivas nina, y muchos otros productos. En forma pa-
1. Aliento. Etílico, en caso de ingestión de alco- radójica, en las grandes dosis de
hol. Varía en intensidad según la bebida inge- antiepilépticos, neurolépticos, etc.
rida. Si existe olor a acetona, pensar en 4. Estupor y coma. Común en la intoxicación por
cetoacidosis, detergentes, limpiacristales, y benzodiazepinas, fenotiacinas, insulina, opiá-
otros que contengan alcohol isopropílico. Olor ceos, antihistamínicos, etanol y otros alcoho-
a almendras amargas en la intoxicación por cia- les, antidepresivos tricíclicos, antiepilépticos y
nuro, a insecticidas en caso de fosforados, a barbitúricos.
gasolina en los derivados del petróleo, a éter 5. Inestabilidad y mareos. Se presentan tras la
en preparados que lo contienen. in- gestión de depresores del SNC.
528
6. Reacciones distónicas. Estas manifestaciones 6. Taquicardia. En medicamentos con efecto
extrapiramidales aparecen con dosis a veces te- anticolinérgico (antihistamínicos), salicilatos,
rapéuticas o con dosis tóxicas de distintos simpaticométicos, cocaína, teofilina,
neurolépticos o antieméticos (metoclopramida). anfetami- nas y CO.

Manifestaciones oculares Manifestaciones cutáneas y de la temperatura


1. Midriasis. Se deben destacar la hipoxia y la 1. Hipertermia. Por lo común tiene varios oríge-
hipotermia como causas de midriasis. Se ve en nes; bien por fármacos que inducen aumento
la intoxicación por antidepresivos tricíclicos, de la actividad muscular (inhibidores de la
fenotiacinas, anticolinérgicos, glutetimida, an- MAO o simpaticomiméticos), o porque
fetamina, cocaína, simpaticomiméticos, teofi- desaco- plan la fosforilación oxidativa
lina, carbamazepinas y meprobamato. (salicilatos), o por su efecto anticolinérgico
2. Miosis. Característica de la intoxicación por (atropina, antihis- tamínicos, etc.).
opiáceos, insecticidas organofosforados y 2. Hipotermia. En depresores del SNC, en los
carbamatos. En la barbitúrica las pupilas están que su intensidad aumenta en la medida en
midriáticas o mióticas. que se profundiza el coma; es un signo de
3. Nistagmo. Se ve nistagmo horizontal en la in- mal pro- nóstico para el intoxicado.
toxicación por barbitúricos, carbamazepina y 3. Piel seca y caliente. Sustancias con acción
fenitoína, entre otros.
anticolinérgica y antihistamínica.
4. Papiledema. Cuando aparece, es secundario al
4. Vesículas y epidermólisis. Se describen con
edema cerebral por hipoxia, y en algunas in-
cualquier sustancia que provoque un coma pro-
toxicaciones por CO y metanol.
longado, como los depresores del SNC.
5. Visión borrosa y pérdida de la visión. La vi-
5. Sudoración. En las provocadas por salicilatos
sión borrosa como consecuencia de la intoxi-
y organofosforados.
cación por depresores del SNC o por
anticolinérgicos, y la pérdida total y parcial de
la visión, son típicas en la intoxicación por el Manifestaciones musculares
metanol y en ocasiones por la quinina. 1. Fasciculaciones. Características de los inhibi-
dores de la colinesterasa.
Manifestaciones cardiovasculares 2. Mioclonias. Tras la exposición al plomo y
1. Arritmias ventriculares. Se produce taquicar- bismuto.
dia o fibrilación ventricular en intoxicaciones 3. Rabdomiólisis. Es una complicación frecuente
graves por anfetamina y sus derivados, cocaí- en las intoxicaciones graves, que ensombrece
na, antidepresivos tricíclicos, digoxina y teofi- el pronóstico y que muchas veces no es buscada
lina. en el enfermo. Se debe a una necrosis muscu-
2. Bloqueo AV y bradicardia. Se observa en las lar de origen multifactorial: comas prolonga-
intoxicaciones por antagonistas del calcio, dos sobre superficies duras, convulsiones,
tonicardíacos, betabloqueadores, inhibidores de rigidez e hiperactividad muscular. Se ha des-
la colinesterasa (organofosforados) y antiarrít- crito con cierta frecuencia en las intoxicacio-
micos. nes agudas por heroína, cocaína, anfetaminas,
3. Hipertensión arterial. En drogas de abuso como estricnina, etc.
la cocaína; también la producen la anfetamina,
los simpaticomiméticos y los anticolinérgicos. Aparato urinario
4. Hipotensión arterial. La inducen las intoxica- 1. Insuficiencia renal. Se la encuentra en algunas
ciones por antidepresivos tricíclicos, fenotia- intoxicaciones agudas como consecuencia de
cinas y teofilina. un efecto tóxico directo (metales pesados), ra-
5. Prolongación del QRS. Con valores mayores bdomiólisis, hemólisis, o del shock.
de 0,12 s, en la intoxicación por antidepresivos 2. Poliuria. Está descrita en la intoxicación por
tricíclicos y propranolol. carbonato de litio.
529
3. Retención urinaria. Es causada por cualquier se han propuesto los exámenes complementarios
sustancia con acción anticolinérgica. mínimos que deberían solicitarse a los intoxicados,
bien para valorar su situación clínica u orientar el
Sistema endocrino y medio interno diagnóstico ante la sospecha no confirmada de una
1. Hiperglicemia. Por lo general es moderada y intoxicación aguda. Éstos incluyen un recuento eri-
transitoria en las intoxicaciones agudas. Se pro- trocitario y leucocitario, electrólitos, creatinina,
duce por agonistas B2, corticoides y tiazidas, CPK, glicemia, gasometría arterial, radiografía de
tórax y electrocardiograma; así como cualquier otro
entre otros.
estudio que se considere necesario para el diagnós-
2. Hipoglicemia. Se ha descrito en las intoxica-
tico y manejo terapéutico del enfermo, como por
ciones por etanol, hipoglicemiantes orales, in- ejemplo:
sulina, propranolol y salicilatos.
3. Hipernatremia. En sobredosis de laxantes. a) Cloro, si se trata de tóxicos que producen in-
4. Hiponatremia. Se la ha encontrado en intoxi- cremento de la brecha aniónica o acidosis
caciones que conducen a secreción inadecuada me- tabólica.
de ADH (amitriptilina, clorpropamida). b) Osmolaridad del plasma y orina, para los que
5. Hipercaliema. Se produce en intoxicaciones por causan hemodilución.
digoxina, alfadrenérgicos, betabloqueadores, c) Calcio, en caso de quelantes, etilenglicol y
sales de potasio, etc. detergentes.
6. Hipocaliemia. En intoxicación por teofilina, d) Coagulograma y proteínas totales, para hepa-
cafeína, betadrenérgicos, bario y diuréticos. totóxicos, anticoagulantes y salicilatos.
e) Carboxihemoglobina o metahemoglobina, útil
Manifestaciones tardías en intoxicaciones por CO o sustancias meta-
La mayoría de las manifestaciones clínicas se pre- hemoglobinizantes.
sentan dentro de las 3 primeras horas posteriores al
contacto con el tóxico, sin embargo, con algunos la Radiología. La radiografía de tórax es importan-
aparición es tardía (incluso días). Su conocimiento te, pues en ella se detectan: neumonitis tóxicas, (óxido
es vital en el momento del ingreso y al indicar el de nitrógeno, metales y otros gases irritantes), neu-
tratamiento. Igual problema ocurre con ciertos me- monía por aspiración (en pacientes comatosos),
dicamentos comercializados que contienen más de ede- ma del pulmón no cardiogénico (heroína,
un producto o principio activo. salicilatos), o atelectasia. En la radiografía simple
de abdomen pueden observarse tóxicos o pastillas
Tóxico Tiempo máximo de aparición de radiopacas (fe- notiacinas, amitriptilina, salicilatos,
los primeros síntomas carbonato cál- cico, plomo o pinturas con plomo,
Amanita phalloides 12 h hierro, arsénico, bismuto, mercurio, tetracloruro
Etilenglicol 6 h Metanol de carbono, yodo, potasio, medicamentos con
48 h
cubierta entérica, paquetes ilegales de drogas de
Paracetamol 36 a 48 h
Salicilatos 12 h abuso, hidrato de cloral, etc.), y en las
Inhibidores de la MAO 12 h intoxicaciones por hidrocarburos una línea
Paraquat 24 h Ricino radiopaca entre el contenido gástrico y el aire, que
(ricinus communis) 4 días Talio resulta útil además en la ingestión de cáusticos.
4 días Electrocardiograma. En muchas intoxicaciones se
Tiroxina 1 semana
Hierro Muy variable
producen arritmias y trastornos de la conducción,
Antidepresivos tricíclicos Muy variable pero con mayor frecuencia suceden en las causadas
por antidepresivos tricíclicos (bastante característi-
co el ensanchamiento del complejo QRS), digitáli-
Exámenes complementarios cos, tricloroetileno e insecticidas organofosforados.
Análisis toxicológicos. Es erróneo pensar que la
No existen reglas fijas para su indicación, por lo que
determinación tanto cualitativa como cuantitativa del
esto debe quedar a juicio del médico; sin embargo,
tóxico en un cuadro de intoxicación aguda tiene
gran
530
valor para el tratamiento del paciente, pues esto en sobre la presencia de arritmias, bradicardia o taqui-
sentido general es falso, ya que en la mayoría de los cardia y variaciones tensionales.
casos resulta poco útil. El tratamiento inmediato y La palpación y auscultación abdominales podrán
de las complicaciones debe iniciarse casi siempre detectar una disminución del peristaltismo
antes de recibir la información del estudio toxicoló- provoca- da por diversas drogas.
gico. A continuación se señalan los casos en que sí
está indicada la solicitud de una determinación cua- Tratamiento
litativa o cuantitativa del tóxico. Las posibilidades terapéuticas que se aplican en
una intoxicación comprenden:
1. En el diagnóstico diferencial de un coma cuan- 1. Las medidas generales de mantenimiento con
do no haya una explicación etiológica. Lo más la corrección de las alteraciones producidas
correcto es la determinación cualitativa en la por el tóxico.
orina y excepcionalmente otra cuantitativa en 2. Las medidas propias de la intoxicación.
la sangre.
2. En niños y jóvenes con convulsiones, arritmias Medidas generales
cardíacas o conductas anormales de causa no La mayoría de las intoxicaciones agudas son con-
aclarada. En el caso del niño es posible que lo troladas con las medidas de apoyo general, que
haya ingerido en ausencia de la madre, y en el persiguen la normalización de las alteraciones car-
del joven que no quiera confesar el consumo diovaculares, respiratorias, renales, hepáticas, neuroló-
de alguna droga de abuso (cocaína, marihua- gicas, del equilibrio hidroelectrolítico y
na, etc.). En ambas situaciones está indicado metabólicas que puedan existir. Como norma
un estudio cualitativo en la orina. general debe seña- larse que las medidas de apoyo
3. Para el diagnóstico de muerte cerebral cuando a las funciones vita- les (vía aérea libre,
exista la sospecha de sobredosis de depresores ventilación y oxigenación, soporte
del SNC si el paciente fuese un donante poten- cardiovascular, etc.), denominadas “méto- do
cial de órganos, para probar la ausencia de és- escandinavo”, son suficientes para conseguir una
tos en el plasma. evolución favorable en la mayoría de las intoxica-
4. En caso que la determinación plasmática del ciones agudas graves. Se realizarán con todo el ri-
tóxico influya en la selección de un tratamien- gor de una reanimación, pero sin embargo, deben
to depurativo extrarrenal. recordarse algunos detalles de las medidas de
actua- ción urgente, como por ejemplo la
5. Como ayuda en el diagnóstico diferencial en
duración de la reanimación cadiorrespiratoria en
pacientes en que no se conoce o se duda del
las intoxicaciones por betabloqueadores,
origen de la intoxicación.
antidepresivos tricíclicos, dextropropoxifeno y
6. Como confirmación de casos en que se conoce antiarrítmicos, que debe ser muy superior a la
supuestamente el origen de la intoxicación. habitual, ya que se han descrito recuperaciones tras
2 a 3 h de masaje cardíaco y ven- tilación.
Diagnóstico En segundo lugar, ante un coma de origen no
El primer paso hacia el diagnóstico es el interroga- acla- rado en una persona joven, se ha propuesto un
torio del acompañante, de haber alguno, sobre los pro- tocolo de actuación útil que se señala a
datos que se señalaron al principio. Luego se proce- continuación.
derá a realizar un examen físico lo más completo
posible, dirigido según el interrogatorio a determi- a) Asegurar una buena vía venosa y administrar
nar el nivel de conciencia, el estado de las pupilas, oxígeno con máscara al 50 %.
la coloración de la piel, la presencia de signos de b) Extraer una muestra de sangre para análisis
venopuntura, de ampollas cutáneas, quemaduras, an- tes de comenzar la solución salina al 0,9
sudoración y el olor del aliento. %.
La auscultación pulmonar orientará sobre la po- c) Administrar 0,8 % de naloxona por vía EV (o
sibilidad de material broncoaspirado, y la cardíaca, IM si no hay la vía venosa), dextrosa al 50 %;
tiamina, 100 mg IM si se sospecha alcoholis-
mo, y considerar la necesidad o no de
flumace- nilo en dosis de 0,25 mg cada 1 min
hasta 2 mg
531
(4 ámpulas de 0,5mg), si se piensa en una in- 2. Lavado gástrico. Constituye el método prefe-
toxicación por benzodiazepinas (contraindica- rido en la gran mayoría de los pacientes, aunque se
do en la intoxicación por antidepresivos deben tener en cuenta algunos factores antes de su
tricíclicos, cocaína, carbamazepina, anteceden- realización, como por ejemplo, si la sustancia inge-
tes de epilepsia o dependencia grave a las ben- rida es poco tóxica o la cantidad fue escasa. No se
zodiazepinas). realiza cuando el tóxico es una sustancia cáustica o
d) Comenzar la perfusión de solución salina un derivado del petróleo, pues se corre el riesgo de
al 0,9 %. perforación y de neumonía lipoide. Si el fármaco
ingerido tiene actividad anticolinérgica o es de ac-
Medidas propias de la intoxicación ción prolongada (retard), o tiene cubierta entérica,
Impedir la absorción del tóxico. La mayoría de los la realización del lavado es útil hasta 4 h después
pacientes intoxicados se presentan con el tóxico en del accidente tóxico. Si el paciente está inconscien-
la vía digestiva, de ahí que se utilicen técnicas para te, se le coloca un tubo endotraqueal con balón ante
prevenir una mayor absorción de éste. En la actuali- el riesgo de aspiración pulmonar. En enfermos con
dad existe cierta controversia en cuanto a la utilidad convulsiones el lavado gástrico no debe realizarse,
de la emesis forzada y del lavado gástrico, pues al- ya que la introducción de la sonda es capaz de
gunos autores señalan que el empleo solamente del desen- cadenar o incrementar éstas. Si fuese muy
carbón activado es tan útil como hacer un lavado necesa- rio, se administra previamente diazepam.
gástrico y administrar luego carbón activado; por De forma habitual el lavado se considera útil en la 4
h posterio- res a la ingestión del tóxico, aunque
esto, la tendencia actual es usar sólo este último.
como ya se men- cionó, en ciertos fármacos
1. Emesis forzada. La emesis forzada suele ser
este período puede prolongarse.
una técnica para los niños, aunque en el adulto se
Para hacer un lavado gástrico se necesitan
realiza cuando este se niega al lavado gástrico. Los sondas especiales, como la de Faucher, de
viejos métodos para inducir el vómito, como las so- diámetro igual o superior a 10 mm, o en su defecto
luciones ricas en sal, la apomorfina, el sulfato de escoger la sonda más gruesa y multiperforarla en
cobre y algunos remedios caseros como el uso de su extremo distal para facilitar una mayor
detergentes y jabones, han sido abandonados por sus irrigación y aspiración del tóxico. Se utiliza agua
efectos indeseables. tibia (35ºC) o solución salina hipotónica al 0,45 %,
Los métodos actuales para inducir el vómito son: con la ayuda de un embudo o jeringuilla. Se coloca
a) Estímulo mecánico de la faringe. Es poco efi- al paciente en decúbito lateral izquierdo con las
caz en el adulto, aunque puede ser útil en los rodillas flexionadas en posición de Trendelemburg
niños. sobre una camilla (de esta forma el píloro queda en
b) Jarabe de ipecacuana. Algunos lo cuestionan, un plano superior al cuerpo gás- trico), y se
aunque es el método más eficaz para inducir el levantan los pies de la camilla unos 20 cm. Entonces
vómito, pues lo produce en el 85 % de los ca- se procede a introducir por la boca de ma- nera
sos. La dosis es de 30 ml por vía oral, que se cuidadosa la sonda de Faucher bien lubricada y se
repite a los 20 min si no se ha logrado el vómi- confirma su presencia en el estómago mediante
to. Una vez ingerido el jarabe, deben de admi- aspiración y auscultación. Debe aspirarse con la je-
nistrarse 300 ml de agua. No es eficaz si ringuilla el contenido gástrico antes de llevar a
previamente se ha dado carbón activado, y su cabo el lavado (se utiliza para el examen
eficacia disminuye si ha transcurrido 1 h del toxicológico) y posteriormente se introducen de
accidente tóxico. La emesis forzada está con- 250 a 300 ml del líquido escogido (agua o suero
traindicada en la ingestión de cáusticos, barni- hiposalino tibio), ya que cantidades superiores
ces y pulimentos de muebles, derivados del favorecen el paso del con- tenido gástrico por el
petróleo, objetos punzantes, o existen obnubi- píloro. Se repite esta opera- ción hasta que el
lación, convulsiones o coma, en embarazadas e líquido extraído esté libre de partículas, de
comprimidos o de tóxicos, por lo que de manera
intoxicados menores de 6 meses. Tiene como
habitual es necesario repetirlo de 10 a 12 veces
efectos adversos la taquicardia y la diarrea, así
(unos 3 a 5 L). Todo este proceso dura de 30 a 40
como el riesgo de aspiración pulmonar.
min. Una vez que el líquido aspirado sea claro,
532
se administra el carbón activado y, por último, se INTOXICACIONES EN LAS QUE LAS DOSIS
retira la sonda ocluyendo siempre su parte proximal REPETIDAS DE CARBÓN ACTIVADO
para que no se corra el riesgo de broncoaspiración. SON EFICACES
Amitriptilina Meprobamato
3. Carbón activado. Es un polvo negro obtenido Antidepresivos tricíclicos Nadolol
por pirólisis de materias orgánicas. Su principal ca- Aspirina Nortriptilina
racterística es la de adsorber numerosas sustancias Benzoadiazepinas Fenobarbital
Carbamazepina Fenitoína
químicas. Se han demostrado numerosos mecanis- Ciclosporina Piroxicam
mos de acción y novedosas indicaciones en la en- Dapsona Valproato
fermedad tóxica, ya que, según como se administre, Dextropropoxifeno Sotalol
sus acciones serán diferentes. Digitoxina Teofilina
Digoxina Otros

Formas de administración y dosificación que se encuentran en la circulación sistémica


aunque haya finalizado la absorción oral o
a) Dosis única. De 50 a 100 g o 1g/kg de peso fue- se administrado por vía endovenosa o
disueltos en 300 a 400 ml de agua. Durante mu- inhala- toria.
cho tiempo se utilizó esta forma, donde alrede-
dor de 10 partes de carbón activado se unían y 4. Laxantes. Su uso es controvertido, pues la ma-
neutralizaban a una parte del tóxico y forma- yoría de los autores apuntan hacia su ineficacia y
ban un complejo carbón-veneno. Cuando se sólo tienen importancia para evitar el estreñimiento
emplea en dosis única, su máxima eficacia se inducido por el carbón activado. El más recomen-
produce al administrarlo antes de la primera dado es el sulfato de magnesio (30 g).
hora, aunque suele ser útil hasta 4 h después. 5. Lavado intestinal. Consiste en instilar amplios
El carbón constituye la mejor forma de impe- volúmenes a través del píloro con el fin de lavar
dir la absorción del tóxico. Las indicaciones completamente el tubo digestivo, para lo que se uti-
de la dosis única de carbón activado abarcan lizan soluciones electrolíticas con polietilenglicol.
casi todos los tóxicos, con excepción de: Este proceder nunca sustituirá al carbón activado,
• Alcoholes (etanol, metanol o etilenglicol). pero se emplea donde este no sea eficaz, como en
• Cianuros. intoxicaciones graves por litio, hierro, plomo, body
• Metales (hierro, litio, plomo). packers (ocultan la droga en preservativos en el es-
tómago y luego la defecan) y en la ingestión
• Potasio.
masiva de medicamentos de acción retardada. Una
• Ácido bórico.
vez pre- parada la solución, se administra a
• Derivados del petróleo.
través de una sonda tipo Levine a razón de 2 L/h.
• Ácidos y álcalis. Se debe conti- nuar su aplicación hasta la salida por
Tampoco se utilizará si hay íleo paralítico o al- el orificio anal de un líquido limpio; durante su
guna alteración del tránsito intestinal. Con cier- administración, el paciente debe estar sentado en la
ta frecuencia produce estreñimiento, lo que se cama.
resuelve con laxantes. Se debe recordar que tiñe 6. Endoscopia y cirugía. La literatura ha publica-
las heces de color negro. do casos en los que se ha realizado una
gastrostomía para extraer masas radiopacas que no
b) Dosis repetidas. La dosis en este caso es un pudieron salir por otros métodos y cuya absorción
tanto menor, alrededor de 25 g de carbón acti- habría sido le- tal, tales como hierro, arsénico, etc.
vado en 150 a 200 ml de agua cada 2 h hasta 10 El empleo de la laparotomía de urgencia es de
veces; en la 5ta. y 10ma. dosis se añaden 30 g primera elección en los body packers o body-
de sulfato de magnesio. stuffers.
El carbón activado es útil aunque el tóxico ya
no esté presente en el estómago, dado su me- Aumentar la eliminación del tóxico
canismo de acción, que semeja una diálisis in- Menos del 4 % de los intoxicados requieren estos
testinal, pues aumenta la eliminación de tóxicos tipos de maniobras, aunque existe la errónea ten-
dencia de forzar la diuresis (uso de diuréticos o
533
sobrehidratación). Como norma general, estas téc- mantendrá para todo tipo de intoxicación que
nicas sólo deben aplicarse a enfermos críticos y cuan- se desee depurar a través del riñón. Se admi-
do no existan antídotos específicos. Se harán en un nistran 1 000 ml de suero glucosado al 5 %,
medio adecuado y por un personal que garantice una más 500 ml de solución salina al 0,9 % con 10
vigilancia estricta. meq de CIK, según el valor inicial del K. Este
A. Depuración renal. Se trata de un procedimiento volu- men se suministra en hora y media si
que precisa experiencia y que utiliza técnicas de hi- no hay contraindicación. Luego se continúa
dratación y de alcalinización de la orina, que hacen con:
que se incremente la eliminación del tóxico; está • Solución de bicarbonato 1/6 molar (500 ml de
contraindicado en el shock, hipotensión con oligu- suero glucosado al 5 % + bicarbonato de Na
ria, insuficiencia renal aguda o crónica, edema ce- al 8 %, 100 meq).
rebral, edema pulmonar, etc. • Suero glucosado al 5 %, 500 ml + 10 meq de
Se emplea en intoxicaciones por medicamentos CIK.
que se eliminen de forma inalterada por la orina y se • Solución salina al 0,9 %, 500 ml + 10 meq de
encuentren parcialmente ionizados en solución, es CIK.
decir, que se comporten como ácidos o bases débi- • Manitol al 10 % (250 ml de manitol al 20 % +
les, por lo que la alcalinización de la orina aumenta- 250 ml de suero glucosado al 5 %).
rá la eliminación de ácidos débiles y su acidificación
lo hará con las bases. Este ciclo debe durar 4 h (cada frasco de 500 ml
Los tóxicos deberán tener las siguientes caracte- en 1 h) y se repetirá las veces que sea necesa-
rísticas: rio. Deben añadirse bolos de 20 meq de bicar-
1. Hidrosolubles. bonato de sodio al 8 % para que el pH urinario
2. Con baja unión a las proteínas plasmáticas. sea menor de 7,5. Hay que suspenderla si apa-
3. Un peso molecular inferior a 70 000. rece alcalosis metabólica grave y vigilar el K
4. Volumen de distribución inferior a 1 L/kg. plasmático. Se aconseja su uso en la intoxica-
ción por: salicilatos, herbicidas clorofenólicos,
Entre las complicaciones que origina se encuen- metotrexate y fenobarbital.
tran: • Diuresis forzada neutra. Consiste en
1. Edema pulmonar. incremen- tar ésta mediante el aporte de
2. Alteraciones del potasio, sodio, calcio y mag- líquidos y diuréti- cos. Para ello se podrá
nesio. seguir la siguiente pauta:
3. Alteraciones del equilibrio acidobásico. • Solución salina al 0,9 %, 500 ml + 10 meq de
CIK.
Es por ello que antes de iniciar la técnica se de- • Suero glucosado al 5 %, 500 ml + 10 meq de
ben conocer las cifras de electrólitos, glicemia, crea- CIK.
tinina, estado acidobásico, pH urinario y los valores • Manitol al 10 %, 500 ml.
plasmáticos del tóxico si es posible. Se coloca un Repetir el ciclo las veces que sea necesario vi-
catéter en una vena central que permita medir la pre- gilando el K. Se utiliza en la intoxicación por
sión venosa central, y se monitoriza la diuresis de litio, bromo, talio, y con cierta controversia en
forma horaria por intermedio de un catéter vesical, las primeras horas de la intoxicación por
que se utilizará además para evaluar el pH urinario. paraquat.
Técnicas de depuración renal: • Diuresis forzada ácida. La diuresis forzada áci-
da ya no se utiliza, pues el riesgo a que se so-
• Diuresis forzada alcalina. En primer lugar debe metía al paciente con esta técnica hizo que se
de restablecerse una volemia adecuada, ya que desechara.
muchas veces estos pacientes están hipovolé- B. Depuración extrarrenal. Las técnicas son
micos (presencia de vómitos, uso indiscriminado multiples: diálisis (peritoneal o hemodiálisis), he-
de diuréticos, efecto de vasoplejía por acción moperfusión, hemofiltración, plasmaféresis y exan-
del propio tóxico, etc.). Este principio se guinotransfusión). Sus indicaciones se señalan a
continuación, pero deben emplearse cuando hayan
fallado otras medidas, la situación del enfermo sea
534
muy crítica o los valores plasmáticos del tóxico así puede estar sujeta a cambios según el laboratorio
lo recomienden. de fabricación y de la experiencia clínica.
1. Diálisis peritoneal. Hubo una época en que se
utilizó en ciertas intoxicaciones, pero hoy en CUADRO 53.1
ANTÍDOTOS MÁS FRECUENTEMENTE
día ha sido superada por la hemodiálisis.
UTILIZADOS EN ALGUNAS INTOXICACIONES
2. Hemodiálisis. Para que el tóxico pueda ser
hemodializado debe tener las siguientes carac- Atídoto Tóxico
terísticas, difíciles de encontrar en ocasiones: 4-aminopiridina. Antagonista del calcio.
alta hidrosolubilidad, peso molecular menor Anticuerpos anticolchicina. Colchicina.
de 600, unión a las proteínas plasmáticas infe- Anticuerpos antidigital. Digoxina, digitoxina y
rior al 60 % y volumen de distribución inferior lanatósido C.
Atropina. Insecticidas (organofosfora-
a 1 kg. Sus principales indicaciones son las in- dos, carbamatos y sustancias
toxicaciones graves por metanol, etilenglicol, colinérgicas).
salicilatos, litio, fenobarbital, bromo, talio, iso- Azul de metileno. Sustancias metahemoglobini-
propanol y procainamida. zantes.
Azul de Prusia. Talio.
3. Hemoperfusión. Consiste en pasar la sangre del
Deferoxamina. Hierro.
paciente a través de filtros que contienen sus- Dimercaprol (BAL). Arsénico, níquel, oro,
tancias adsorbentes, como el carbón activado, bismuto, mercurio, plomo,
resinas aniónicas y amberlita. Es eficaz en la antimonio.
intoxicación por barbitúricos de acción corta y D-penicilamina. Arsénico, cobre, oro, mercu-
rio, zinc, plomo.
media, meprobamato, teofilina, quinidina, car-
EDTA cálcico-disódico. Plomo, cadmio, cobalto y
bamazepina y metotrexate. Se usa en intoxica- zinc.
ciones muy graves. EDTA dicobáltico. Ácido cianhídrico, sales de
4. Hemofiltración, hemodiafiltración y hemodiá- cianuro, ácido sulfídrico.
lisis continua. Su empleo es muy limitado, pero Etanol. Metanol, etilenglicol.
Fisostigmina o eserina. Sustancias anticolinérgicas.
hay buenos resultados en casos de intoxicación Flumacenilo. Benzodiazepinas.
por litio y procainamida (hemodiafiltración y Folinato cálcico. Metotrexate y otros antago-
hemofiltración), y metotrexate. nistas del ácido folínico.
5. Plasmaféresis y exanguinotransfusión. Su uso Fomepizol o 4-metilpirazol. Metanol, etilenglicol.
Glucagón. Betabloqueadores y antago-
suele ser excepcional, sin embargo, la primera
nistas del calcio.
de ellas ha resultado exitosa en las intoxicacio- Gluconato cálcico. Ácido oxálico y antagonistas
nes por tiroxina y digitoxina, donde hay una del calcio.
gran unión a las proteínas plasmáticas de estos Glucosa. Hipoglicemiantes orales e
tóxicos, y la segunda, en los casos graves de insulina, coma de origen des-
intoxicaciones por metahemoglobinizantes. conocido.
N-acetilcisteína. Paracetamol, tetracloruro de
carbono.
C. Tratamiento con antídotos. La administración Naloxona. Opiáceos, coma de origen
de antídotos ante algunas intoxicaciones mejora de desconocido.
manera espectacular estos cuadros, sin embargo, en Neostigmina. Sustancias anticolinérgicas.
contra de la creencia popular y de algunos médicos Obidoxima. Insecticidas organofosfora-
de que todos los tóxicos tienen antídotos, sólo exis- dos.
Oxígeno. Monóxido de carbono y otros
ten para un pequeño número; además, algunos pro- gases.
ducen efectos secundarios tanto o más graves que el Pralidoxima. Insecticidas organofosforados.
tóxico al que se quiere antagonizar. Debe recordarse Protamina. Heparina.
que un antídoto específico, aunque es evidentemen- Succímero (DMSA). Plomo.
te útil, no es algo inocuo y que deben vigilarse las Tierra de Fuller. Paraquat y diquat.
Vitamina B6 Isoniacida.
complicaciones.
Vitamina B12 Cianuro.
En el cuadro 53.1 se exponen algunos de los antí-
Vitamina K y plasma. Anticoagulantes.
dotos usados con más frecuencia; su dosificación
535
Distintos autores insisten en combatir errores que • No administrar oxígeno en los enfermos
se cometen a menudo en el manejo del paciente in- expues- tos a incendios, combustión
toxicado. Tales son dichos errores: incompleta, o ga- ses de escape de motor.
• Intentar neutralizar con ácidos (limón, vinagre)
• Creer que la leche es un antídoto universal (al la ingestión de álcalis y viceversa, pues la
contrario, por su contenido en grasa, es capaz reac- ción exotérmica que se produce
de incrementar la absorción de distintos medi- aumenta el daño. Lo que debe hacerse es
camentos en el tracto digestivo). diluirlo.
• Considerar que la furosemida y un suero acele-
• Creer que en todo paciente intoxicado debe
ran la excreción de medicamentos y del alcohol.
rea- lizarse lavado gástrico, pues éste tiene
• Creer que el pan tostado o quemado sustituye al
carbón activo. algunas contraindicaciones.
• Lavar el estómago con bicarbonato de sodio (ex- • Hacer el lavado gástrico con el enfermo en una
cepto en la intoxicación por hierro), pues puede posición inadecuada, como es sentado o en de-
incrementar la absorción de salicilatos. cúbito lateral derecho, pues de esta forma faci-
• No proteger las vías aéreas en el momento del lita el paso del tóxico ingerido al intestino
lavado gástrico en el enfermo en coma. delgado. También, el practicarlo con sondas de
• No administrar naloxona, glucosa y tiamina en pequeño diámetro (4 a 5 mm de luz).
los pacientes en coma presumiblemente tóxico • Desconocer que el carbón activado es tan útil o
o de causa desconocida. más que el lavado gástrico.
536
54
INTOXICACIÓN POR PESTICIDAS
(PLAGUICIDAS)
El término pesticidas (o plaguicidas) incluye a to- c) Por vía cutánea, como consecuencia de su
dos aquellos productos orgánicos e inorgánicos que con- tacto con superficies extensas de la piel.
se emplean para combatir o prevenir la acción de
agentes de origen animal o vegetal que atacan al Las intoxicaciones agudas accidentales por lo
hombre, animales o plantas, según el uso para el cual general son secundarias a violaciones de las medi-
estén destinados. das de seguridad, tanto en su fabricación como en
Reciben distintas denominaciones, por ejemplo: su empleo, y en el hogar, por el consumo de
alimen- tos contaminados o por accidentes por
Nombre Uso confusión.
Insecticida Insectos A continuación se describirán las intoxicaciones
Acaricida Ácaros por algunos insecticidas y herbicidas.
Nematicidas Gusanos
Moluscocidas Caracoles, limacos,
babosas
Herbicidas Malas hierbas INSECTICIDAS
Rodenticidas Roedores y otros
vertebrados
Esterilizantes Inhiben el crecimiento Intoxicación
de los huevos de los in-
sectos por organoclorados
Repelentes Ahuyentan a los insec- El DDT, posiblemente el plaguicida más conocido,
tos pertenece a este grupo y se ha prohibido en muchos
Fungicidas o Hongos y mohos países; existen otros, como el lindano, metoxicloro,
anticriptogámicos hexaclorobenceno, dicofol, metoxicloro y el
Atrayentes Reclamos sobre cebos endosulfán, que es el más tóxico de todos.
envenenados para in-
sectos y roedores.
Manifestaciones clínicas
El cuadro clínico es polimorfo y depende de la
Es importante conocer que existen plaguicidas que puerta de entrada, del tipo de plaguicida y de la
pueden simultanear diferentes acciones a la vez, por cantidad absorbida. Si la vía de entrada es la
ejemplo, insecticidas que serán igualmente herbici- digestiva, se produce una gastroenteritis con
das o fungicidas. náuseas, vómitos, dolores de tipo cólico y diarreas;
Los pesticidas o plaguicidas penetran en el orga- si es la respirato- ria, aparecen alteraciones en la
nismo a través de las siguientes vías: laringe y tráquea. Se han descrito dermatosis de
a) Por vía oral, habitualmente por accidentes, aun- sensibilización, pero se cree que se deben más al
que hay casos intencionales. disolvente, que por lo ge- neral son derivados del
b) Por vía respiratoria, tras la inhalación de polvo petróleo, que al plaguicida. Luego aparece un
de pesticida o líquido pulverizado en estado ga- cuadro sistémico en el cual pre- domina la
seoso. sintomatología neurológica central, don- de son
típicas las convulsiones; a veces se presentan

537
arritmias cardíacas graves que pueden terminar con Fisiopatología
una depresión cardiorrespiratoria, coma y muerte.
La intoxicación aguda por organofosforados produ-
ce una inhibición o inactivación de la enzima
Tratamiento acetil- colinesterasa; como que esta enzima es la
Es crucial la eliminación del tóxico lo más rápido encargada de destruir el neurotrasmisor
posible. Según la vía de entrada, se realiza un lava- acetilcolina en la sinapsis nerviosa, su
do gástrico y es aconsejable el empleo de dosis re- inactivación causa un aumento de ésta en el
petidas de carbón activado. Hay que limpiar la piel receptor y, por tanto, un exceso de ma-
con agua y jabón si hay contacto con ella y nunca se nifestaciones colinérgicas, tanto nicotínicas como
administrará leche o aceites, ya que facilitan la ab- muscarínicas, centrales y periféricas (síndrome
sorción del tóxico. No existen antídotos específicos colinérgico o parasimpaticomimético). La inactiva-
y es inútil intentar la diuresis forzada y la depura- ción de la colinesterasa se realiza mediante su
ción extrarrenal. fosforilación, que es un proceso reversible, pues
Las medidas son sintomáticas; diazepam para las llega un momento en que la colinesterasa se
convulsiones y el mantenimiento de las funciones reactiva de nuevo; sin embargo, en dependencia
cardíaca y respiratoria. No se deben emplear ami- del tipo de organofosforado ingerido, la
nas simpaticomiméticas, pues a veces provocan arrit- reactivación de la en- zima puede ser
mias cardíacas. extraordinariamente lenta. Manifestaciones
clínicas
Intoxicación Las manifestaciones clínicas tardan en aparecer en-
tre 5 min y varias horas (lo más habitual), y consis-
por organofosforados ten en síntomas y signos de tipo nicotínico y
muscarínico. En las intoxicaciones ligeras se obser-
Etiología va cansancio, signos muscarínicos y pocos nicotíni-
Los organofosforados son plaguicidas utilizados con cos; sin embargo, en las graves, además de lo
bastante frecuencia en la industria, agricultura y en anterior se produce una seria afectación del
el hogar como insecticidas, aunque también como SNC, y en particular insuficiencia respiratoria y
fungicidas, acaricidas, herbicidas y nematicidas; tie- coma, con ries-
nen una elevada toxicidad, pero no presentan pro-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
blemas de acumulación, como los organoclorados. DE LA INTOXICACIÓN AGUDA
Son compuestos que contienen carbón y derivados POR ORGANOFOSFORADOS
del ácido fosfórico. Su toxicidad es variable; por
Efectos Efectos Efectos sobre
ejemplo, el paration es muy tóxico y el malation lo muscarínicos nicotínicos el SNC
es mucho menos.
Broncospasmo Ansiedad. Fasciculaciones.
con broncorrea.
ALGUNOS INSECTICIDAS ORGANOFOSFORADOS Cólicos y Ataxia y convul- Incordinación
Alta toxicidad Mediana toxicidad Baja toxicidad diarreas. siones. motora.
Carbofenotión Acefato Fenitrotión Hipotermia. Arreflexia, Respiración de
Disulfotón Diazinón Malation mioclonias. Cheyne-Slokes.
Bradicardia. Cefalea. Taquicardia.
Forato Diclorvos Temefos
Hipotensión Vértigos. Hipertensión arterial.
Fosmadión Dicrotofos
arterial.
Mercarbam Etión
Incontinencia Coma.
Metamidafos Merfos de heces y
Metilparation
orina.
Paration Miosis y visión Debilidad muscular.
borrosa.
Náuseas y Depresión respiratoria.
vómitos.
Sudoración. Hiperglicemia.
Sialorrea y
lagrimeo.
538
go de muerte. Aunque la miosis es la norma, a veces con abundante agua y jabón líquido, preferiblemen-
se demora en aparecer y hasta en el 10 % de los te, y si es posible, que contenga un 30 % de
casos se presenta midriasis. alcohol; el jabón sólido a veces provoca con el
Como consecuencia de la alta lipofilia, los sínto- lavado intenso lesiones en la piel capaces de
mas podrían persistir durante días o semanas o bien favorecer la absorción del tóxico, y el vehículo
presentar recidivas; casos como estos se han visto alcohólico contrarrestará la posible lipofilia del
en pacientes que se han aplicado el producto en el tóxico. Si éste se inhaló, se ad- ministrará oxígeno.
cuero cabelludo y en el pubis con fines pediculocidas El antídoto se empleará según la gravedad del
y han olvidado el lavado amplio con agua y jabón cua- dro: la atropina, que revierte los síntomas
de estas zonas. muscarí- nicos por bloquear los receptores
Es importante tener presente la posible aparición correspondientes, y la pralidoxima, o en su
del “síndrome intermedio”, cuadro que muchas ve- defecto obidoxima, que reactivan la colinesterasa
ces pasa inadvertido y que se presenta alrededor desactivada o inhibida.
del 4to. día después que finaliza la fase aguda; se Se comienza con una dosis de prueba de atropi-
caracteriza por debilidad muscular recurrente que
na (1 o 2 mg) por vía EV; si después de esta dosis
recuerda a un síndrome miasteniforme, parálisis de
se desarrollan signos de atropinización (midriasis,
nervios craneales y paro respiratorio, y que se ha
ta- quicardia, piel seca o rojiza, fiebre o íleo
relacionado con el uso insuficiente en dosis o dura-
intestinal), de forma rápida (10 min), significa que
ción de la pralidoxima.
la intoxica- ción es leve y que no se necesita más el
Además de este síndrome, que se ve luego de la
fase aguda, se han descrito cuadros tardíos (hasta 3 medicamen- to. Si luego de esta prueba no
semanas después de la intoxicación) como secuelas aparecen signos de atropinización, se continúa
crónicas; tales son la neuropatía periférica con pares- administrando 2 a 4 mg por vía EV cada 15 min,
tesias en las extremidades inferiores, debilidad mus- hasta que se observen se- ñales de mejoría
cular, ataxia, parálisis fláccida simétrica, trastornos (desaparición de las secreciones endobronquiales)
de la conducta, disminución de la memoria y altera- y se proseguirá aunque hayan apa- recido la
ciones del estado de ánimo. midriasis u otros signos de atropinización; si la
sintomatología persiste, se continuará con una
Exámenes complementarios perfusión EV a la dosis de 0,02 a 0,08 mg/kg/h,
La colinesterasa plasmática (valores normales en- que se mantiene hasta 72 h (y en algunos casos más
tre 3 500 y 8 500 U/L) o la colinesterasa en los he- tiem- po) si persisten los signos de intoxicación.
matíes (valores normales de 26 a 43 U/g de Hb) Es importante conocer que la atropina sólo mejo-
mostrarán valores bajos. Esta última es un marca- ra las manifestaciones muscarínicas, ya que carece
dor de gravedad si sus valores disminuyen, pues de efecto sobre las nicotínicas, de ahí que siempre
existe una correlación entre la cifra de colinesterasa sea necesario añadir pralidoxima al tratamiento con
eritrocitaria y el estado clínico del intoxicado. antídotos; ésta se utiliza como coadyuvante de la
Tratamiento atropinización (nunca se empleará sola) y siempre
La descontaminación del paciente es una medida después de la administración de la atropina; se debe
vital para evitar que el tóxico continúe absorbiéndo- tener en cuenta, además, que sólo resulta eficaz
se, y el personal que lo asiste debe utilizar guantes cuan- do su utilización se comienza dentro de las
para no contaminarse. Si el tóxico fue ingerido, se prime- ras 24 o 48 h de la intoxicación. Sus efectos
realiza un lavado gástrico protegiendo la vía respi- aparecen entre 10 y 40 min después de su
ratoria, ya que es habitual que los organofosforados aplicación, lo que se comprueba al mejorar la
estén disueltos en derivados del petróleo y se puede fuerza muscular, signo importante que se debe
provocar una neumonitis. Luego se administra car- tener en cuenta cuando el paciente requiere
bón activado en la dosis establecida. ventilación mecánica artificial y se decide
Si hubo contaminación cutánea, hay que retirar comenzar la separación (destete) del respirador
todas las ropas del paciente y luego hacer un lavado artificial. Se aconseja una dosis de 1 a 2 g por vía
EV disueltos en 100 ml de solución salina, que
puede repetirse 1 h después y a partir de ahí cada
6 u 8 h, o dejar una perfusión continua de 500 mg/h.
539
El tratamiento con atropina y pralidoxima debe Antes se pensaba que no estaba indicado el uso
continuar hasta que mejore el cuadro clínico (au- de pralidoxima en la intoxicación por carbamatos,
sencia total de los síntomas colinérgicos, como es la sobre todo si era por carbarilo; hoy se considera
hipersecreción); la mayoría de los autores aconse- que sí se puede emplear en la misma dosis que en
jan seguir con este tratamiento 24 h más tras finali- la in- toxicación por organofosforados y estará
zar toda sintomatología, pues se ha visto que si se totalmen- te justificada su administración en las
suspenden precozmente ambos antídotos, el pacien- intoxicaciones mixtas (organofosforados-
te puede presentar recidivas (síndrome intermedio).
Las convulsiones se tratan con diazepam EV (10 carbamatos). Piretrinas
a 20 mg) lentamente. Son productos de origen vegetal derivados del cri-
La ventilación artificial se emplea si existe hipo- santemo, aunque una gran mayoría de estos insecti-
ventilación, y si se decide la intubación, se debe evi- cidas se obtienen por síntesis. En los últimos años
tar el uso de fisostigmina, succinil colina y sedación se han puesto de moda con la comercializaciónn de
con opiáceos, pues deprimen el SNC y agravarían “aerosoles matamoscas, cucarachas y mosquitos”,
los síntomas neurológicos. que se utilizan en el hogar.
Las piretrinas son poco tóxicas. Los pacientes
Intoxicación por que las inhalan presentan reacciones alérgicas,
pareste- sias, rinitis agudas, dermatitis y cuadros
carbamatos de asma bronquial.
El tratamiento incluye la descontaminación y
Los carbamatos utilizados como insecticidas son medidas sintomáticas.
alquilcarbamatos, y los más comercializados son el
aldicarb, baygon, bendiocarb, carbarilo, carbofurano,
metiocarb, metomilo, oxamilo y proposur. Su me-
canismo de acción consiste en la inhibición reversi-
HERBICIDAS
ble y transitoria de la acetilcolinesterasa, por lo que
producen un cuadro similar al de los organofosfora- El uso de los herbicidas bipyridilos, paraquat (gra-
maxone) y diquat, es conocido desde 1958. En
dos, aunque más benigno, entre otras razones por-
nues- tro país comenzaron a utilizarse ampliamente
que atraviesan poco la barrera hematoencefálica y
ambos a partir de 1970. Cuando su empleo es
de ahí las escasas manifestaciones colinérgicas cen- correcto, el riesgo de toxicidad es mínimo, ya que
trales; no obstante, pueden penetrar por cualquier la inhalación de pulverizadores tiene escasas
vía y causar la muerte. El más tóxico es el aldicarb. consecuencias y la absorción cutánea, aunque
Manifestaciones clínicas posible, es poco frecuente. Utilizado en más de 130
Son similares a las producidas por los organofosfo- países, su uso con fines suicidas se ha
rados, pero más benignas y de menor duración (no incrementado en algunos, como Malasia y
duran más de 6 h y tardan en aparecer entre 30 min Japón. Se le ha considerado responsable de
y 2 h). Los carbamatos sólo causan manifestaciones lesiones pulmonares en fumadores crónicos de
marihuana contaminada y también se ha señalado
muscarínicas y nicotínicas periféricas (aumento de
como posible causante del síndrome por aceite
las secreciones, broncoconstricción, incontinencia
tóxi-
urinaria, bradicardia, bloqueo de la conducción AV,
co, aunque sin poderlo asegurar.
miosis y visión borrosa, fasciculaciones, calambres,
Cuando la intoxicación es masiva, la muerte so-
debilidad), no afectan al SNC y si lo hacen, es de
breviene en horas o días por fallo multiorgánico.
forma muy débil. Las convulsiones son poco fre- Con dosis inferiores (30 a 50 mg/kg), la
cuentes. insuficiencia res- piratoria progresiva por fibrosis
pulmonar es la res- ponsable del fallecimiento,
Tratamiento cuya aparición es tardía, incluso hasta 6 semanas
Es idéntico al que se utiliza en la intoxicación por tras la intoxicación, y a ve- ces, tras un período
organofosforados. asintomático cuando ya ha des- aparecido la
sintomatología digestiva y se ha normalizado
la función renal.
540
Dosis letal rece la fibrosis pulmonar con gran proliferación de
Cualquier exposición oral al concentrado comercial leucocitos y de profibroblastos.
al 20 % se debe considerar en potencia fatal. Las
ingestiones en adultos que exceden los 50 ml de la Cuadro clínico
solución concentrada de paraquat son también uni- Se producen efectos locales y sistémicos. Los efec-
versalmente mortales, en tanto que entre 10 o 50 ml tos locales son cáusticos y las lesiones no ocurren
del concentrado pueden ser fatales. La dosis letal en por las variaciones extremas del pH (preparados
adultos oscila entre 3 y 6 g (ejemplo, 20 ml al 20 %). comerciales con pH de 4 a 8), sino por citotoxidad
directa. Las quemaduras en los casos de ingestión
Absorción oral se presentan en la región perioral, labios y en
A pesar de la escasa absorción gastrointestinal, la la mucosa del tracto digestivo. Si el ingreso es por
ruta oral es la vía usual para la intoxicación severa. in- halación, se produce irritación y quemaduras
La absorción dérmica es mínima, a menos que exis- en la mucosa nasofaríngea y bronquial. En los
tan lesiones en la piel. Las gotas de paraquat ojos tie- nen lugar desde alteraciones inflamatorias
aerosolizadas poseen diámetros que exceden las 5 hasta le- siones corneales. Estos efectos locales se
micras, lo que significa que estas partículas no lle- presentan inmediatamente después de la ingestión
gan a la membrana alveolar para causar toxicidad del producto. El efecto sistémico requiere horas y
directa ni sistémica por vía inhalatoria.
días antes de que se haga evidente y depende de la
cantidad ab- sorbida. Si es en grandes cantidades,
Distribución la intoxicación tendrá una evolución fulminante,
El paraquat se distribuye en todos los órganos prin-
pero si es peque- ña, ésta será lenta. Tras la
cipales: hígado, riñón y cerebro, pero se concentra
ingestión de más de 6 g, al cabo de 1 h se
de forma selectiva en el pulmón, lo cual justifica su
presentan náuseas, vómitos, dolor abdominal y
gran toxicidad pulmonar. El tejido pulmonar con-
diarreas; posteriormente aparecerá el shock
centra niveles 10 o 15 veces superiores a los plas-
(hipovolémico o por depresión miocárdica), toma
máticos y se alcanzan en los 4 o 5 días posteriores a
del sensorio y convulsiones. Entre las 12 y 24 h se
la ingestión. El neumocito tipo II del parénquima
producirá insuficiencia respiratoria, edema pul-
pulmonar distal es la célula diana.
monar (no cardiogénico) y muerte por shock, o hi-
poxemia refractaria.
Eliminación
La ingestión de 3 a 6 g causa el cuadro digestivo
La mayor parte del tóxico se elimina por filtración
descrito, con mejoría a las 24 h y predominio de las
glomerular y por secreción tubular activa a las 48 h
molestias bucofaríngeas, tos, disfagia y trastornos
aproximadamente, y de 20 al 30 % permanece enla-
del habla; en la mucosa orofaríngea, esofágica y
zado a los tejidos y se excreta a las 2 o 3 semanas;
gástrica aparecen placas blanquecinas que posterior-
por la bilis sólo se excreta una pequeña porción.
mente se ulceran. A las 72 h presentará subíctero y
Fisiopatología oligoanuria como consecuencia de la necrosis
El mecanismo probable de toxicidad parece ser la hepá- tica y tubular renal, de forma respectiva. A
-
, HO -), depleción los 5 o 7 días tendrá lugar el distress respiratorio,
que es la causa de la muerte, debido a la fibrosis
pulmonar
formación de radicales libres (O2 2
del superóxido dismutasa y de la nicotinamida progresiva e irreversible, fenómeno este que sólo se
adenina dinucleótido fosfato reducido (NADPH), lo presenta en la intoxicación por paraquat y no ha
que origina la destrucción de la estructura celular y sido descrito en la intoxicación por diquat; ésta es
la anulación de su función; este efecto tóxico au- la úni- ca diferencia existente entre ambos
menta en presencia de oxígeno, por lo que de manera productos.
tradicional se trata a estos pacientes con concentra- Si se ingieren dosis más pequeñas, entre 1,5 y 3
ciones mínimas de O2 y se les instala tempranamen- g, se producirán síntomas digestivos y
te ventilación mecánica con presión positiva al final ocasionalmente lesión renal de moderada
de la espiración o presión continua de las vías aé- intensidad, mientras las manifestaciones
reas. La prohidroxilasa pulmonar aumenta y favo- respiratorias tardan en aparecer des- de 10 a 20 días
hasta 4 a 6 semanas, lo que no impi- de que sean
causantes de la muerte.

541
Diagnóstico de Fuller, se debe usar carbón activado (50 g como
dosis inicial y luego 30 g cada 2 h o 1g/kg cada 4
Se establece por los datos del interrogatorio, el cua-
h). Algunos autores han aconsejado el lavado
dro clínico y algunos exámenes complementarios.
intestinal total mediante la solución evacuante
Es útil para el diagnóstico rápido el test de screening:
Bohn (2 L/h hasta que salga limpio por el ano)
tras la alcalinización del contenido gástrico o de la por sonda naso- gástrica; su utilidad está en
orina (5 a 10 gotas de NaOH 0,1 N en 5 a 10 ml de discusión y presenta el riesgo de favorecer el
líquido de lavado gástrico u orina hasta un pH > 8), edema agudo del pulmón en una intoxicación
se produce una coloración azulverdosa en presencia grave.
de uno de estos herbicidas. El límite diagnóstico se Se han empleado diferentes medidas
encuentra en aproximadamente 1 g/ml (1 mg/L). terapéuticas, como la vitamina E y el ácido
El hallazgo cuantitativo se realiza por fotometría ascórbico como antioxidantes, ambas con
mediante radioinmunoanálisis o por cromatografía resultados contradictorios. El selenio es un
de gases. cofactor de la enzima glutatión peroxidasa y su
déficit en ratas incrementa la sus- ceptibilidad al
Tratamiento paraquat; sin embargo, no existen estudios
Tratamiento profiláctico clínicos que recomienden su uso.
Cumplir las siguientes disposiciones en relación con Otras sustancias como el D-propranolol, superóxi-
el producto. do y clofibrate dismutasa no han demostrado su efi-
1. Control estricto de su distribución. cacia.
2. Uso de medios de protección por el personal Recientemente se preconizó la administración de
que trabaja con él. una asociación de ciclofosfamida-dexametasona,
en la dosis de 5 mg/kg/día de ciclofosfamida y 24
3. No utilización de recipientes donde estaban en-
mg/ día de dexametasona, durante 14 días. Algunos
vasados.
au- tores han reportado supervivencia del 72 % con
4. Educación de la población sobre su grado de
este esquema terapéutico.
toxicidad. La hemoperfusión, sobre todo dentro de las 10
5. Evitar el acceso de los niños, deficientes men- primeras horas, tiene cierta utilidad, así como la he-
tales y las personas con trastornos psiquiátri- modiálisis, aunque para algunos su eficiencia tam-
cos a él. bién es dudosa.
Para inhibir la proliferación de profibroblastos,
Tratamiento del paciente intoxicado que dan origen a la fibrosis pulmonar, se ha utiliza-
La sola sospecha de la ingestión, aun en cantidades do en algunos casos la radioterapia, sobre todo de
mínimas, de un preparado que contenga paraquat o un solo pulmón para evitar un incremento de la
diquat será motivo de ingreso en la UCI. El trata- neumonitis.
miento puede ser exitoso en dependencia de la pre- También se ha propuesto el trasplante de pulmón
cocidad con que se actúe y con la agresividad que se y en el momento actual están en investigación anti-
aplique; es importante conocer que este tipo de in- cuerpos (Fab) antiparaquat.
toxicación no es sínonimo de muerte, aunque sí se Como se ha dicho, las únicas medidas aceptadas
reconoce y se afirma la alta mortalidad que posee. de manera universal como eficaces son la disminu-
El lavado gástrico se practica rápidamente, con ción de la absorción del tóxico con carbón activado
precaución por la presencia de úlceras orofaríngeas, o la tierra de Fuller; una vez absorbido éste, el
esofágicas o gástricas. Es vital para la mejoría evi- trata- miento es de soporte y de vigilancia
tar que el tóxico continúe absorbiéndose y se deberá intensiva, aun- que no hay que descartar las
intentar aunque hayan transcurrido varias horas de otras medidas propuestas. Se vigilarán durante
la ingestión oral; para ello se utilizan dos sustan- días a los pacientes que sobrevivan, pues suelen
cias: la tierra de Fuller y el carbón activado. De la aparecer complicacio- nes tardías.
primera se administran 60 g disueltos en 200 ml de Se trabaja fundamentalmente en la profilaxis,
agua por vía oral cada 2 h durante un máximo de 2 con formulaciones de paraquat que dificultan su
días; después de cada dosis son recomendables los inges- tión y absorción con la adición de eméticos;
laxantes si no hay diarreas; si no se dispone de tierra quizás sea en el campo de la prevención donde es
posbile hacer más para disminuir la elevada
mortalidad de este tóxico.
542
55
INTOXICACIÓN POR PSICOFÁRMACOS
Los psicofármacos son sustancias que se utilizan con 3. Hipnóticos.
fines terapéuticos para modificar reacciones psíqui- a) No barbitúricos.
cas. Se emplean para tratar la ansiedad, la depre- • Glutetimida.
sión, estados psicóticos severos, y en el tratamiento • Hidrato de cloral.
del insomnio y las convulsiones. • Paraldehído.
Entre los psicofármacos, los sedantes e hipnóticos • Bromuros.
son los causantes de la mayoría de las intoxicacio- b) Barbitúricos.
nes producidas por ellos. Las benzodiazepinas, los • Fenobarbital.
barbitúricos y el meprobamato, por ser los más uti- • Amobarbital.
lizados, constituyen causa frecuente de intoxicación
• Secobarbital.
intencional o accidental.
4. Anticonvulsivantes.
En altas dosis deprimen el sistema nervioso y las
• Fenobarbital.
funciones respiratoria y circulatoria, lo que puede
• Difenilhidantoína.
llevar a la muerte en dependencia de la cantidad
ingerida, la tolerancia del paciente al fármaco y la • Primidona.
asociación con otras sustancias depresoras del siste- • Trimetadiona.
ma nervioso, como el alcohol. • Carbamazepina.
El estado de coma prolongado facilita, además, 5. Psicoestimulantes.
la aparición de la bronconeumonía aspirativa, úlce- • Anfetamina.
ras por decúbito y otras complicaciones debidas a la • Metilfenidato.
postración. 6. Antidepresivos.
• Imipramina.
Clasificación de los psicofármacos • Amitriptilina
de uso más frecuente
1. Neurolépticos o antipsicóticos. a)
Derivados de las fenotiacinas. BARBITÚRICOS
• Clorpromazina.
• Levomepromazina. La intoxicación por barbitúricos se observa todavía
• Trifluoperazina. en la práctica clínica y puede ser causa de muerte.
• Tioridazina. A principios de 1970 la sobredosis de barbitúricos
b) Derivados de la butirofenonas. fue la principal causa de muerte producida por
fárma- cos. Posteriormente, la aparición de
• Haloperidol.
benzodiazepi- nas más eficaces y seguras como
• Triperidol. sedantes, desplazó a los barbitúricos del primer
2. Tranquilizantes o ansiolíticos. lugar en el orden de frecuencia de las
• Clorodiazepóxido. intoxicaciones, pero aún se conti- núan
• Meprobamato. presentando.
• Benactizina. Los barbitúricos se clasifican según su modo de
acción en: ultracorta, 0,3 h (tiopental, metohexital,

543
tiamilal); corta, 3 h (pentobarbital, ciclobarbital, en su totalidad, absorción que es máxima cuando el
secobarbital); media, 3 a 6 h (butabarbital, amobar- estómago está vacío o si se ha ingerido una dieta
bital, aprobarbital), y prolongada, 6 a 12 h (barbital, rica en grasas, que aumentan la solubilidad del bar-
mefobarbital, fenobarbital). Este último, por ser uti- bitúrico. Los barbitúricos deprimen la motilidad in-
lizado frecuentemente como anticonvulsivo e hip- testinal y, por tanto, se alarga el tiempo de
nótico, es el que más envenenamientos intencionales absorción de la dosis ingerida. Una vez
o accidentales produce en nuestro medio. absorbidos, se distri- buyen uniformemente por los
Los de acción corta y media se usan como hipno- tejidos, en especial el sistema nervioso, y deprimen
sedantes; los ultracortos, como anestésicos, y los de la función cerebral de manera progresiva, lo que
acción prolongada, como anticonvulsivantes, fun- produce coma profundo e incluso la muerte.
damentalmente. La rapidez de acción está asociada a El mecanismo de acción de los barbitúricos no
una mayor liposolubilidad e implica un predomi- es completamente conocido. Se cree que actúan
nio de metabolización hepática. Todos ellos, con por estimulación del sistema inhibidor sináptico
excepción de los de acción ultracorta, se absorben GABA
con rapidez en el tracto digestivo. Los de acción corta (ácido gamma amino butírico), lo que impide la
se metabolizan en el hígado y los de acción prolon- neurotrasmisión en el SNC. Su acción sedativa e
gada se eliminan en mayor proporción por vía renal. hipnótica puede obedecer a una inhibición de la
Las dosis letales son variables: 1g en el caso del neuroconducción a nivel de la sustancia reticular
tiopental; 2 a 3 g, butabarbital y pentobarbital; 3 g, ascendente, de lo que resulta una disminución de
secobarbital; 5 g, fenobarbital, y 10 g, barbital. los impulsos que alcanzan la corteza cerebral.
Se ha de tener en cuenta la tolerancia, ya que po- Los barbitúricos se metabolizan de forma lenta,
sibilita que dosis tóxicas tengan poca traducción clí- son conjugados en el hígado y se excretan por el
nica en algunos casos. riñón. El fenobarbital tiene la característica de ser
menos liposoluble y no es metabolizado tan exten-
Factores predisponentes y agravantes samente. Casi el 25 % se excreta sin cambios por la
Diferentes factores condicionan la severidad del orina. Estas propiedades se tendrán en cuenta al va-
envenenamiento por barbitúricos y entre ellos están lorar los métodos de tratamiento que deban utilizar-
el tipo de fármaco, la dosis, la tolerancia del enfer- se en el manejo del envenenamiento por estos
mo, la edad y el estado de salud previo. Los barbitú- productos.
ricos de acción corta producen por lo común
situaciones de shock y fallo respiratorio, dada su gran Cuadro clínico
liposolubilidad y más facilidad para distribuirse en Después de la ingestión de una dosis tóxica de bar-
el cerebro. bitúricos, es común que se presente un período ini-
El envenenamiento en edades extremas de la vida cial que se caracteriza por trastornos de la
comporta un peor pronóstico, al igual que la enfer- conducta, tales como euforia, agitación,
medad hepática o renal concomitante, ya que estos locuacidad, incohe- rencias, alucinaciones, marcha
órganos constituyen la vía de excreción de estas dro- de ebrio, etc. Este pe- ríodo va seguido de
gas. La diabetes mellitus, el embarazo, el alcoholis- inconsciencia progresiva, que oscila desde un
mo, la desnutrición y las enfermedades crónicas paciente dormido, capaz de ser des- pertado, hasta
uno comatoso con reflejos abolidos, depresión
asociadas, también agravan el pronóstico.
respiratoria con cianosis o fallo circulato- rio y
Fisiopatología shock.
El envenenamiento por barbitúricos ocurre en su Las pupilas son normales, mióticas o midriáticas
mayoría por ingestión con ánimo suicida, aunque la y con escasa respuesta a la luz.
causa accidental a veces sucede en niños. El enve- El mayor riesgo de muerte obedece a la depre-
nenamiento criminal prácticamente no existe en sión de la respiración, que causa hipoventilación al-
nuestro medio.
veolar. No es rara la depresión de la función del
La ingestión del fármaco no produce irritación
miocardio, que junto a la dilatación vascular perifé-
local en el segmento digestivo superior y se absorbe
rica y disminución del retorno venoso, producen hi-
potensión arterial y shock.
544
El coma progresivo con pérdida del reflejo farín- los reflejos (primero el corneal), luego se manifies-
geo y laringotraqueal, predispone a la broncoaspira- ta la sensibilidad al dolor, y lentamente se va recu-
ción y bronconeumonía. Esto, junto a complicaciones perando la conciencia, previo estado transitorio de
por el decúbito que en ocasiones se presenta, expli- excitación. A veces persisten durante varios días
ca el riesgo elevado de muerte, si no se realizan ac- tras- tornos de la ideación y la palabra.
ciones médicas emergentes. La hipotermia sólo está La restitución total sin secuelas es lo habitual,
presente en las formas más graves. excepto en aquellos casos que hayan sufrido daño
Según el grado de afectación de la conciencia y cerebral secundario a hipoxia o en los que se pre-
los signos vitales, se clasifican a las víctimas en 5 senten complicaciones, como bronconeumonías, úl-
grupos o etapas: ceras por presión y otras inducidas por el estado de
coma.
Etapa 0: Estuporoso, pero responde a la orden
verbal. Pronóstico
Etapa 1: Responde a estímulos dolorosos, pero El pronóstico depende de la dosis, la edad y el esta-
no al verbal. do de salud del paciente, y la aplicación rápida y
Etapa 2: No responde a estímulos, pero conserva oportuna de medidas de soporte vital y métodos
los reflejos y los signos vitales son estables. Etapa
depuradores del tóxico, con lo cual la mortalidad se
3: No responde a estímulos, está arrefléxico, pero
reduce ostensiblemente. En el presente, ésta es me-
conserva los signos vitales estables.
nor de un 2 % en la mayoría de las series
Etapa 4: No responde a estímulos, está arrefléxico
publicadas referentes a casos hospitalizados por
y sus signos vitales están inestables.
sobredosis de barbitúricos, lo que obedece a la
aplicación inicial de medidas de soporte vital,
El shock de la etapa 4 resulta de la depresión
métodos depuradores y cuidados generales.
medular que induce el fármaco y es indicio de muerte
inminente si no se procede en forma enérgica.
Tratamiento
Diagnóstico
El tratamiento de la intoxicación por barbitúricos se
El diagnóstico clínico del coma barbitúrico se plan-fundamenta en: prevención, aplicación de medidas
tea sobre la base de antecedentes de tendencia suicida
de soporte vital, depuración del tóxico, uso de me-
en el paciente, trastornos psicológicos o psiquiátri-
didas generales y tratamiento de las complica-
cos, hallazgos de restos o envase del fármaco. De- ciones.
ben excluirse otras causas de coma, sobre todo
La prevención se logra con el adecuado manejo
metabólicas, como cetoacidosis diabética, coma he-
y control sobre el uso de estos medicamentos.
pático y urémico. Todos los estados de coma, sean
Las medidas incluyen: venta por receta médica,
de causa neurológica, infecciosos, traumáticos,
dosifi- cación adecuada y mantenimiento de los
tumorales o cerebrovasculares, se incluyen entre los
diagnósticos diferenciales. medicamen- tos fuera del alcance de los
La demostración del barbitúrico en muestras en- niños, enfermos psiquiátricos y ancianos con
viadas al laboratorio de toxicología (contenido gás-discapacidad.
trico, sangre, orina), resulta de gran ayuda para La utilización de medidas de soporte vital se
esclarecer el diagnóstico. Debe recordarse que son basa en la experiencia escandinava de
frecuentes las asociaciones de dosis tóxicas de bar- Clemmensen y Nilsson, que redujo la letalidad
bitúricos con otros psicofármacos y el alcohol. de intoxicaciones de este tipo mediante el uso
Evolución oportuno de dichas me- didas. La pronta utilización
del “ABC” de reanima- ción, que se refiere a la
En las formas leves el paciente evoluciona hacia la permeabilización de la vía aérea y al apoyo de la
curación, aun de forma espontánea. También es fa-
ventilación, oxigenación y circulación, garantiza la
vorable la evolución cuando se aplica un tratamien-
supervivencia del paciente mientras se utilizan los
to oportuno y bien dirigido. Poco a poco aparecen
métodos depuradores del tóxico y se corrige la
hipotermia que pueda existir. Las medidas de
vaciado gástrico y la administra- ción de carbón
activado de forma repetida durante
545
las primeras 24 h, asociado a un catártico, están in- dosis ingerida, y luego evoluciona hacia el coma
dicadas (ver tratamiento general de las intoxicacio- profundo.
nes) si la vía digestiva ha sido la puerta de entrada. El inicio y la duración del cuadro clínico depen-
Por la capacidad que tienen los barbitúricos de derá del tipo de benzodiazepina ingerida, aunque en
enlentecer el tubo digestivo, las técnicas menciona- la mayoría de los casos los síntomas aparecen a
das pueden indicarse dentro de las primeras 6 a 8 h los 15 o 45 min de la ingestión. Cuando esta es úni-
de la ingestión del tóxico. Por lo general, con las ca (una benzodiazepina no mezclada con otro pro-
medidas descritas se tratan con éxito más del 95 % ducto), es difícil que el coma sea muy profundo al
de estas intoxicaciones. inicio, pues incluso el paciente llega a despertarse
La gravedad de la intoxicación (criterio clínico) para entrar rápidamente en coma de nuevo, donde
corroborada por la barbituremia (criterio analítico) aparece hipotonía; sin embargo, cuando la intoxica-
permitirá seguir una técnica depurativa. La diuresis ción está asociada a otra medicación (antidepresi-
forzada alcalina está indicada si el barbitúrico es de vos, etc.) o alcohol, hecho muy común, entonces se
acción prolongada y los valores plasmáticos de fe- alcanza con facilidad el coma profundo, con insufi-
nobarbital son superiores a 75 mg/dl (ver tratamiento ciencia respiratoria aguda, hipotensión e hipotermia.
general de las intoxicaciones). La hemodiálisis tam- Como consecuencia del coma prolongado y del
bién se emplea si el tóxico es barbital o fenobarbital contacto de la piel con superficies más o menos
(hidrosolubles, poco unidos a las proteínas plasmáti- duras, es posible observar en algunas personas
cas) con valores plasmáticos superiores a 100 mg/dl. ampollas o vesículas cutáneas o un síndrome
Los de acción ultracorta, corta y media por lo común vesiculoampolloso. Como complicación está la
son tributarios de una hemoperfusión, habitualmente neumonía por aspira-
si la concentración plasmática supera los 50 mg/dl. ción.
La mortalidad es muy baja (inferior al 0,1 %) y
los casos de mayor gravedad ocurren en las intoxi-
caciones por triazolán, alprazolán, midalozán y
BENZODIAZEPINAS temazepam.

Las intoxicaciones agudas por benzodiazepinas son Tratamiento


producidas por el siguiente grupo de tranquilizan- La emesis, el lavado gástrico y el carbón activado
tes: bromazepam, camazepam, clobazán, cloracepato deben ser utilizados para disminuir la absorción del
diposático, clorodiazepóxido, diazepam, flunitraze- tóxico.
pam, flurazepam, halazepam, ketazolán, nitrazepam, Las medidas de sostén vital serán aplicadas pre-
cozmente, pues reducen la letalidad; ellas incluyen
pinazepam, quecepam, alprazolán, bentazepam,
la permeabilización correcta de la vía aérea
brotizolán, clotiacepam, loprazolán, lorazepam, mediante intubación endotraqueal, aspiración de
lometazepam, midazolán, oxazepam, triazolán, etc.; secreciones, adecuada oxigenación y apoyo de la
o por sustancias sin estructura benzodiazepínica: ventilación y circulación.
zopiclona y zolpidén, pero que farmacológicamente Actualmente se preconiza el uso de la imidaben-
se comportan como éstas. Su empleo es muy fre- zodiazepina (Flumazenil o Anexate) como antago-
cuente en nuestro medio como intento de suicidio y nista competitivo de las benzodiazepinas a nivel de
su vía de administración principal es la oral; desde sus receptores en el SNC. El Flumazenil bloquea
el punto de vista epidemiológico quizás sea la in- los receptores de las benzodiazepinas en las células
del SNC, de manera que éstas son incapaces de
toxicación más común en nuestra práctica diaria.
efec- tuar su acción tóxica. De esta forma, los
Manifestaciones clínicas efectos hipnóticos y sedativos de las
Las manifestaciones clínicas más frecuentes son las benzodiazepinas son con rapidez revertidos
neurológicas, pues produce depresión del SNC con después de administrado el Flumazenil por vía EV;
toma de la conciencia; inicialmente, el paciente pre- sin embargo, los efectos re- siduales pueden
senta estupor y ligera ataxia en dependencia de la reaparecer unas horas después, ya que la vida
media de este antagonista es de aproxi- madamente
1 h. Se necesitan, por tanto, dosis repe- titivas en la
mayoría de los casos.
546
La excreción del fármaco se prolonga en quienes mar concreciones a nivel del estómago (rock drug),
padecen de insuficiencia hepática, lo que debe ser por lo que las medidas de vaciamiento gástrico son
tenido en cuenta. También los sujetos dependientes de mucha importancia, sobre todo en lo que respec-
de las benzodiazepinas, por uso continuado, mues- ta al lavado gástrico que obviamente debe ser am-
tran en ocasiones síntomas de supresión, como con- plio para tratar de disolver las posibles
vulsiones, después de administrárseles el Flumazenil. concreciones ya establecidas.
El Flumazenil se presenta en ampollas de 5 y 10 ml
que contienen 0,1mg/ml. La dosis inicial es de 0,3 mg Tratamiento
(3 ml) EV, administrada en forma rápida (en bolo), La conducta terapéutica en estos casos se basa en
que se repite hasta un máximo de 3 mg (30 ml) si re- los principios de sostén de las funciones vitales, el
sulta necesario. En situaciones de coma profundo tratamiento específico y en el resto de las medidas
se prefiere mantener una infusión continua de 0,2 que aparecen en el tratamiento general de las
a 0,5 mg/h en 6 u 8 h. Esto se logra diluyendo 25 ml del intoxi- caciones. Por su efecto depresor del SNC es
producto (2,5 mg) en 250 ml de solución de dextro- necesa- rio garantizar una adecuada ventilación, y
sa al 5 %, a un ritmo de infusión de 20 ml/h (0,2 mg/h) si fuese necesario, utilizar técnicas de ventilación
mediante el uso de una bomba de infusión. De no mecánica artificial, sobre todo el mantenimiento
disponerse de bomba infusora, se utlizará un de los indi- cadores hemodinámicos con
microgotero de 20 microgotas/min o en su defecto 6 adecuado aporte de volumen o la administración
gotas/min en un gotero habitual (1 gota normal equi- de aminas presoras. El estado de coma suele tener
vale a 3 microgotas en un microgotero). fluctuaciones, con mejo- ría del nivel de conciencia
Las reacciones adversas que aparecen con su em- y una posterior profundi- zación de aquél, debido a
pleo son náuseas, vómitos, ansiedad, palpitaciones, una nueva absorción del tóxico por la presencia de
mareos bruscos, miedo, eritema facial, inducción de las concreciones de éste en el estómago.
convulsiones, en pacientes que también han ingeri-
do sobredosis de antidepresivos tricíclicos, carba-
mazepina, cocaína y síndromes de abstinencia, sobre
todo en los epilépticos tratados de forma crónica con
ANTIDEPRESIVOS
benzodiazepinas.
Los antidepresivos son en nuestro medio, después
de las benzodiazepinas, la causa más frecuente de
MEPROBAMATO intoxicación medicamentosa voluntaria en el adul-
to; su amplia difusión ha determinado que sean fá-
cilmente utilizados en los intentos de suicidio.
El meprobamato es un psicofármaco que tiene ade- Se clasifican en:
más propiedades miorrelajantes. La intoxicación por Tricíclicos o de primera generación (son los
su uso es poco frecuente, aunque se ve en asocia- más tóxicos): imipramina, desipramina, ami-
ción con barbitúricos, alcohol o benzodiazepinas en triptilina, protriptilina, nortriptilina, trimipra-
intento de suicidio. Se consideran letales dosis su- mina y doxepina.
periores a 12 g con niveles plasmáticos que supe- Tetracíclic1os o de segunda generación: ma-
ran los 100 mg/dl. protilina, mianserina y mirtacipina.
Bicíclicos o de segunda generación:
Cuadro clínico viloxacina, cimeldina y trazodona.
El cuadro clínico resultante de la ingestión de dosis
tóxicas es un estado de coma profundo, que se pue- Existen ya los de tercera generación o inhibidores
de acompañar de caída de la presión arterial debido selectivos de la recaptación de serotonina
a la disminución de las resistencias vasculares peri- (fluoxetina, zimelidina, citalopram, paroxetina). Son
féricas. Existe, además, la posibilidad de que se pre- antagonitas competitivos de los receptores
sente edema agudo del pulmón, sobre todo si se muscarínicos de la acetilcolina y también de los
utiliza incorrectamente la diuresis forzada. Debe receptores histamínicos H1 y H2. Ingestiones de 10 a
recordarse que este tipo de fármaco es capaz de for- 20 mg/kg son tóxicas, y se consideran graves las de
20 a 40 mg/kg.
547
Producen una acción sistémica anticolinérgica: 1. Ingresar a toda persona, con síntomas o sin
midriasis, visión borrosa, sequedad de las mucosas, ellos, que refiera haber ingerido 10 mg/kg.
taquicardia, constipación, retención urinaria, tem- 2. Canalizar una vena, hacer el examen físico,
blores y arritmias, a veces graves. En dosis muy realizar un ECG e indicar estudios
elevadas causan disartria, hiperreflexia, rigidez ex- complemen- tarios.
trapiramidal, mioclonias, ataxia, coma, depresión 3. Aunque el paciente esté asintomático, se le
respiratoria, hiporreflexia osteotendinosa y convul- debe hacer un lavado gástrico, pues tiene
siones. Si no están asociados a otros psicofármacos, utilidad aunque hayan transcurrido 12 h
el coma dura menos de 8 h. El cuadro clínico neuro-
debido a la acción anticolinérgica
lógico adquiere cierta tipicidad, pues el coma man-
(disminución del peris- taltismo) de este
tiene reflejos plantares y están ausentes otros reflejos
dependientes del tronco cerebral. Puede concomitar tóxico. Se dejan en el estóma- go 50 g de
con hipotermia, hipoxia, depresión respiratoria, aci- carbón activado luego que el líquido del
dosis metabólica e hipocaliemia. lavado sea claro (recordar que en nuestro
Las arritmias y las alteraciones electrocardiográ- país el fármaco está cubierto con una capa
ficas son frecuentes (50 a 80 %) y determinantes de azul que tiñe el agua de color azulado). Se
gravedad. Por lo general se producen dentro de puede continuar con carbón activado a la dosis
las 12 h posteriores a la ingestión, e incluso se han de 25 g cada 2 h, durante 20 h, y administrar
descrito arritmias graves varios días después. La exis- catárticos en las 5ta. y 10ma. dosis (30 g de
tencia de acidosis causa una mayor fracción libre de sulfato de magnesio) para contrarrestar la
la droga no unida a las proteínas plasmáticas, lo que entrada del tóxi- co en la circulación
incrementa la toxicidad. No está aclarado si la géne- enterohepática.
sis de las arritmias es la acción anticolinérgica o si 4. Bicarbonato de sodio, que por un mecanismo
existe también un efecto tóxico miocárdico. Son au- no muy bien aclarado mejora las
riculares, nodales y ventriculares; también ocurren manifestacio- nes clínicas, como las arritmias,
alargamiento del PR, QRS y QT bloqueos de rama y convulsiones e hipotensión.
auriculoventriculares y depresión de la onda T en el La dosis de ataque es de 1 a 2 mg/kg, por vía
ECG. Una duración del ORS superior a 0,10 s se EV; luego se administra de forma continua
correlaciona con una mayor producción de arritmias para mantener el pH entre 7,50 y 7,55. El
cardíacas y convulsiones. La determinación empleo de bicarbonato se debe realizar aunque
plasmática del tóxico corrobora el diagnóstico, pero no exista acidosis metabólica; el objetivo de
sin que necesariamente las cifras obtenidas guarden mantener el pH sanguíneo entre 7,50 y 7,55
una relación directa con los cambios electrocardio- durante 24 h es lograr que los tricíclicos se
gráficos ni influyan en el tratamiento; aunque algu- separen de los ca- nales del sodio y ceda la
nos han señalado que un complejo QRS mayor
sintomatología. El res- to de la hidratación
de 0,10 s se correlaciona de forma aproximada con
se realiza con suero glucosalino de forma
valores superiores a 1000 mg/ml.
simultánea a la adminis- tración de
Los antidepresivos de segunda generación, con
bicarbonato.
excepción de la maprolitina, así como los inhibido-
5. El Flumacenilo está contraindicado, pues es
res de la recaptación de serotonina, son los menos
capaz de desencadenar agitación,
tóxicos; ellos apenas ocasionan alteraciones del rit-
convulsiones o arritmias.
mo cardíaco, sólo producen cierto grado de seda-
ción y es infrecuente la aparición de convulsiones o 6. Se utilizan benzodiazepinas para la agitación
hipotensión. y no los neurolépticos, pues en ocasiones
empeo- ran las arritmias por su efecto
Tratamiento anticolinérgico.
7. La hipotensión se maneja con la administra-
Las bases del tratamiento de la intoxicación por an-
ción de líquidos.
tidepresivos tricíclicos y por maprolitina son las si-
8. Las convulsiones se tratan con diazepam o fe-
guientes: nobarbital; no se aconseja utilizar fenitoína,
pues ésta incrementa la cardiotoxicidad.
9. Las arritmias se combaten con la administra-
ción de bicarbonato (antes señalado); si
persis- ten, se utilizan otros antiarrítmicos del
tipo de la lidocaína o bretilio. Está
contraindicado el
548
uso de quinidina, procainamida, disopirami- paros cardiorrespiratorios provocados por
da, flecainamida, encainida y propafenona. sobredosis de antidepresivos tricíclicos, las
También se ha demostrado que el empleo de téc- nicas de reanimación cardiopulmonar se
propranolol y verapamilo pudiera ser peligroso de- ben prolongar durante 2 h, pues se han
10. El paciente, antes de su egreso, debe permane- descrito reanimaciones en intoxicaciones por
cer al menos 24 a 48 h sin arritmias, ya que se antidepre- sivos tricíclicos tras 2 o 3 h de
han reportado recurrencias entre 3 y 5 días des- masaje cardía- co externo.
pués de la intoxicación aguda. En todos los
549
56
INTOXICACIÓN POR PARACETAMOL
El paracetamol o acetaminofén es un fármaco utili- dolor suele haber aumento de la bilirrubina in-
zado como analgésico y antipirético, y su uso es cada directa y una prolongación del tiempo de pro-
vez mayor como automedicación. trombina.
La intoxicación aguda por paracetamol se obser- c) Estadio de 36 a 72 h posingestión. Aquí co-
va tras la ingestión masiva con carácter voluntario o mienzan las manifestaciones clínicas, que de-
penden de la necrosis hepática (aumento
por sobredosificación en pacientes alcohólicos,
espectacular de las transaminasas, bilirrubina
hepatópatas y desnutridos, que lo ingieren de forma
y fosfatasa alcalina) y ocasionalmente del fa-
crónica. En el adulto se produce con dosis superio- llo renal.
res a los 10 g/día, o 7,5 si el enfermo tiene alguna d) Estadio de 72 a 120 h posingestión. Hay icte-
hepatopatía, es un crónico, un alcohólico, su admi- ricia marcada, dolor en el hipocondrio derecho,
nistración concomita con la del fenobarbital o es un sangramientos, alteraciones sensoriales, ence-
mal nutrido; en todos estos casos hay una afecta- falopatía hepática, síndrome hepatorrenal y
ción del sistema microsomal hepático. coma. La hipoglicemia es un signo de mal
pro- nóstico.
Fisiopatología
e) El paciente fallece por lo general a los 6 u 8
El paracetamol en dosis terapéutica es transforma- días en coma hepático, acidosis metabólica o
do en el hígado mediante su conjugación en meta- insuficiencia renal aguda. Sin embargo, hay
bolitos atóxicos; sólo una pequeña parte resulta que señalar que la necrosis hepática no se
oxidada por el citocromo P-450, que luego de dife- produce en todos los pacientes que tienen
rentes transformaciones se convierte finalmente en valores su- puestamente tóxicos, pues en
ácido mercaptúrico, que es inocuo; sin embargo, en alrededor del 20 % de los casos no ocurre; esta
casos de intoxicación aguda se produce una dismi- ausencia de toxici- dad se ha explicado por los
nución del glutatión hepático, lo que representa una posibles cambios en la capacidad enzimática
merma de la capacidad antioxidante y causa lesión del citocromo P-450, que proporcionan la
hística, tanto en el hígado como en ocasiones en el edad, la dieta o la inges- tión concomitante
riñón. de otros medicamentos ca- paces de
proporcionar cierta hepatoprotección.
Manifestaciones clínicas
a) Estadio inicial (0 a 24 h posingestión). El pa- El riesgo de hepatotoxidad está en función de los
ciente está asintomático o presenta de forma valores plasmáticos del tóxico y se estima de acuer-
leve náuseas, vómitos, anorexia y malestar ab- do con tablas, como las de Rumack Mathews, don-
dominal de a través de los niveles plasmáticos de
b) Estadio de 24 a 36 h posingestión. Puede con- paracetamol y las horas transcurridas posingestión,
tinuar la ausencia de síntomas o aparecer, si no se puede su- gerir la administración del antídoto
lo han hecho, náuseas y vómitos; es frecuente para evitar la necrosis hepática.
la presentación de un dolor en el cuadrante su-
perior derecho del abdomen, signo precoz de
Tratamiento
lesión hepática grave. Conjuntamente con este El tratamiento consiste en la administración del antí-
doto (N-acetilcisteína), que se hará según los
valores

550
plasmáticos de paracetamol y el tiempo transcurri- que se administra por sonda nasogástrica por su
do posingestión; sin embargo, se acepta que en au- mal sabor y para evitar vómitos.
sencia de estos datos se aplique N-acetilcisteína a Las dosis serán las siguientes:
todo paciente del que se tenga certeza que haya in-
gerido más de 140 mg/kg (más de 7,5 g en el adul- Vía oral: dosis de ataque, 140 mg/kg; de mante-
to). Este tratamiento será más eficaz cuando se nimiento, 70 mg/kg c/4 h, por 3 días.
comienza dentro de las primeras 8 o 10 h y pierde su Vía endovenosa. Los viales se disuelven en
eficacia pasadas 16 h posingestión. suero glucosado, y se administran: dosis inicial: 150
El lavado gástrico y el carbón activado en dosis mg/kg en 250 ml de suero glucosado al 5 %, que
única son útiles y al parecer este último interfiere deben pasarse en 15 min. Se continúa
poco con el uso oral del antídoto. entonces con
El antídoto se administra por 2 vías: oral y EV. 50 mg/kg en 500 ml de suero glucosado al 5 %
La primera de ellas tiene la desventaja de que suele pa- sados en 4 h, y luego 100 mg/kg en 1 000
provocar vómitos, y la vía EV tiene el riesgo, aun- ml de suero glucosado al 5 % en 16 h.
que muy escaso, de manifestaciones alérgicas; para
cualquiera de las 2 vías se utilizarán ámpulas de El resto del tratamiento será sintomático y en
acetilcisteína (Fluimucil-antídoto al 20 %) de 10 ml. aque- llos pacientes en que se prolongue el tiempo
Para el empleo oral se prepara una solución al 5 % de pro- trombina, se debe administrar vitamina K y
plasma fresco.
551
57
INTOXICACIÓN AGUDA
POR DROGAS DE
ABUSO
Resulta algo difícil conceptuar el término droga de
abuso, pues en teoría cualquier sustancia podría con-
OPIÁCEOS
siderarse como tal si se abusa de ella. Se define de Y DERIVADOS
esta forma a toda sustancia empleada con propósi-
tos no médicos, capaz de producir una modificación La drogadependencia emanada del consumo de de-
en la conducta del individuo. En terminología médi- rivados opioides (heroína principalmente) se
ca también se utilizan los términos de toxicomanía, incrementó alrededor de 1980, y pasó de los gran-
farmacodependencia, drogadependencia (drogadic- des grupos urbanos a la mayoría de las poblaciones
ción), etc. de la geografía mundial. A partir de ese momento
el consumo ha disminuido, por temor al SIDA,
Clasificación de las drogas de abuso pero ha persistido su letalidad.
Existen varias clasificaciones, pero en toxicología La intoxicación aguda a veces accidental por
clínica la que más interés tiene es la siguiente: opiá- ceos no sólo se produce por heroína, sino que
puede ser inducida por cualquier derivado natural,
Depresores del SNC. semi- sintético o sintético del opio (morfina,
• Hipnóticos (barbitúricos, benzodiazepinas, meperidina, pentazocina, etc.), o por opiodes
etanol, etc.). (codeína, reasec, etc.), empleados todos como
• Hipnoanalgésicos (opiáceos y derivados). antidiarreicos, antitusígenos o analgésicos.
• Disolventes por inhalación (tolueno, hexano,
acetona, acetato de etilo, tetracloroetileno, ga- PRINCIPALES OPIÁCEOS
solina, etc.). Derivados del opio: Codeína, morfina.
Estimulantes del SNC. Semisintéticos: Heroína, hidromorfona, oxicodona,
oximorfona.
• Anestésicos locales (cocaína). Sintéticos: Alfaprodina, anileridina, bupre-
• Aminas despertadoras (LSD - 25, psilocibina, norfina, butarfanol, fentanil,
etc.). dextrometorfano, difenoxilato,
• Aminas simpaticomiméticas (MDA, mezca- levorfanol, loperamida, meperi-
dina, metadona, nalbufina, penta-
lina, etc.).
zocina, propoxifeno.
• Derivados de la isoquinolina (peyotina).
• Derivados anticolinérgicos (fenciclidina). Los intentos de suicidio por opiáceos son poco
• Varios (cannabis, ketamina, etc.). frecuentes y se han dado fundamentalmente en per-
sonal de la medicina que sustrae estos tipos de me-
Sólo se describirán las intoxicaciones agudas con dicamentos. Se han descrito sobredosis en niños
trascendencia en las urgencias médicas, centrándo- que ingieren de forma accidental grandes
nos fundamentalmente en sus manifestaciones clí- cantidades de analgésicos que contienen codeína,
nicas, diagnóstico y tratamiento del accidente agudo. dextropropoxi- feno, antidiarreicos y antitusígenos.

552
Sintomatología El antagonista competitivo es la naloxona. Su
Aunque en nuestro país no es frecuente, en otras la- dosis es de 0,4 mg (1 ámpula) por vía EV. Si no
hay mejoría de la respiración, no hay respuesta a
titudes la intoxicación aguda por heroína deberá sos-
los es- tímulos o continúa la miosis, se repite la
pecharse ante cualquier individuo joven que presente
misma do- sis cada 2 o 3 min mientras sea
esta tríada: miosis, depresión respiratoria y estupor necesario. No hay que temer a la intoxicación por
o coma. Los estigmas cutáneos de adicción a drogas este antídoto, salvo por la presencia de vómitos. Se
por vía parenteral (venopunción) son signos que fa- ha llegado hasta dosis de 75 mg (187 ámpulas); sin
llan en algunos pacientes; bien porque estén bajo embargo, si con 10 mg no hay respuesta, es mejor
tatuajes, se hayan empleado venas del pie o del pene, pensar en otro diagnósti- co. Si no se logra
o se administre la droga por vía inhalatoria o por canalizar una vena, administrarla por vía
inyección sublingual. intramuscular, subcutánea e incluso intratra- queal,
En el examen físico se destaca la disminución de aunque su eficacia es menor.
la frecuencia respiratoria y en algunos casos la pre- Cuando revierte el cuadro, si éste fue intenso, es
sencia de apnea. Es posible que aparezca cianosis. necesario seguir administrando dosis de manteni-
Existe reducción de la conciencia que en ocasiones miento a fin de que no se repita la depresión
llega al coma, en el que, a diferencia de otros comas respira- toria, ya que la vida media de la naloxona
por depresores del SNC, el paciente despierta ante es muy corta, mientras que la de algunos opiáceos
órdenes verbales, pero debido a la acción analgési- es larga, por lo que los síntomas pueden reaparecer.
ca de los opiáceos, lo hace difícilmente ante los es- La dosis de mantenimiento se emplea de dos
tímulos dolorosos. formas: 0,4 mg cada 2 h o bien 1,6 mg disueltos en
En más del 90 % se observa miosis bilateral in- suero glucosado administrados en 8 h.
Es importante señalar que si son adictos a dosis
tensa. Sólo existe otra causa de pupilas puntiformes
altas de heroína y la reversión del cuadro se produ-
y es en la hemorragia protuberancial; pero este sig-
ce muy rápido, en algunos casos aparece un síndro-
no no aparece si el opiáceo fue la meperidina, o si
me de abstinencia.
los compañeros drogadictos lo tratan de despertar
El resto de las medidas serán el soporte vital, así
inyectándole anfetamina, cocaína u otra medida ca- como el tratamiento de las complicaciones (edema
sera. Cuando la depresión del SNC origina anoxia agudo del pulmón, convulsiones, arritmias, etc.), por
cerebral e hipotermia, entonces ocurre midriasis, que lo que deben vigilarse en una UCI.
es un signo de muy mal pronóstico.
La complicación más frecuente es el edema agu-
do del pulmón no cardiogénico, aunque no son raras
las convulsiones, ya que la mayoría de los opiáceos
COCAÍNA
disminuyen el umbral convulsivo y ocurren sobre
todo con sobredosis de morfina, meperidina y dex- La cocaína es el alcaloide fundamental que se ex-
tropropoxifeno. Otros síntomas son hipotensión, bra- trae de las hojas de la planta de coca (Erythroxylon
dicardia, hipotermia, arritmias, etc. coca). De ella se hacen distintos preparados (hojas,
El diagnóstico fundamentalmente es clínico, aun- pasta de coca, clorhidrato de cocaína, cocaína
que el paciente o sus compañeros suelen confesar. base). Fue utilizado alguna vez como anestésico
Su detección cualitativa en orina es sencilla (EMIT- general en medicina. Las formas más empleadas en
los con- sumidores son:
st o Adx). Si existe duda, se realiza el estudio en
orina hasta las 24 h. Después no se detecta.
1. El clorhidrato de cocaína. Es la sal que se
Tratamiento ven- de en las calles de países consumidores,
Las bases del tratamiento son el empleo de la con un grado de pureza extraordinariamente
naloxona y el soporte respiratorio y hemodinámico. varia- ble (entre un 15 y un 90 %). El resto de
El lavado gástrico y el carbón activado se usarán en su com- posición es difícil de precisar, pues
casos de sobredosis ingeridas de medicamentos opiá- contienen talco, lactosa, cafeína, anfetamina,
ceos. lidocaína, etc. La forma habitual de
consumirla es por vía intranasal (esnifar una
raya), aunque se absorbe
553
bien por otras mucosas si se extiende en ellas muchas veces no dependen de las dosis, pues hay
(glande, vagina, sublingual, encía, recto, etc.). casos en que aparecen con un par de “rayas”
También se administra por vía parenteral. debido a la presencia de colinesterasas anormales.
2. Cocaína base. También conocida como base La esti- mulación del SNC representa el efecto
libre, cocaína alcaloide, crack y rock. Esta for- farmacológico más notable de la cocaína. Ésta
ma se obtiene mezclando clorhidrato de cocaí- inhibe la recaptación de aminas biógenas como la
na con una solución básica, y luego se filtra el adrenalina, noradrena- lina, dopamina y la
precipitado o se disuelve con éter y se le deja serotonina. Los signos clínicos resultantes de la
intoxicación serán midriasis, taqui- cardia,
evaporar, con lo que se forman unos pequeños
hipertensión, hipertermia, sudoración y agi- tación
cristales (rock). Su forma de consumo consiste
psicomotora. Ocurren también convulsiones
en fumarla directamente en canutillo o pipa. tonicoclónicas generalizadas, y la aparición de es-
Cuando la base libre se fuma, se producen unos tos trastornos depende de la vía de administración y
efectos similares a los conseguidos con la ad- de la dosis. Fumada o administrada por vía EV, és-
ministración de cocaína EV. Su acción eufori- tos se presentan en segundos y alcanzan el efecto
zante dura unos 20 min, pero es intensísima, pico en forma casi instantánea. Su aplicación tópica
mientras que la cocaína “esnifada” dura varias en la mucosa nasal requiere varios minutos para
horas, pero con un efecto euforizante menor. pro- ducir su acción y de 20 a 30 min para lograr su
Los free base kits contienen benceno, éter o ga- pico máximo.
solina, que actúan como solventes extractores En el sistema cardiovascular su uso se asocia a
de la forma alcaloide. La cocaína extraída se infarto agudo del miocardio, taquiarritmias ven-
calienta hasta conseguir un estado gaseoso y triculares, incremento de la demanda de oxígeno
se inhala. El crack es resistente al calor, mien- por el miocardio, hipertensión arterial, aumento
tras que la sal de cocaína no es estable frente a de la aterosclerosis y disección aórtica.
la pirólisis. Éste se fuma y se absorbe por vía En el SNC su empleo se relaciona con
pulmonar con efecto rápido. convulsio- nes, hemorragia intracerebral, infarto
cerebral, vasculi- tis cerebral, síndrome de la arteria
Los dos metabolitos principales de la cocaína son medular anterior, vasospasmo cerebral, y con la
la benzoilecgonina y el éster metílico de ecgonina. oclusión de la arteria central de la retina. Su
Su metabolismo se lleva a cabo mediante las estera- consumo puede asociarse ade- más a rabdomiólisis
sas hepáticas, las seudocolinesterasas o butirilcoli- e isquemia intestinal. Diagnóstico
nesterasa y la hidrólisis no enzimática (espontánea). Por lo general el paciente lo confiesa, pero se
Sintomatología sospe- chará en un enfermo que presente arritmias
La cocaína es un potente estimulante del SNC. Los cardía- cas y convulsiones, sin antecedentes de
efectos subjetivos luego de una dosis de cocaína convulsiones previas, y además, hipertermia e
consisten en una mayor fortaleza y capacidad de hipertensión. Las pruebas rutinarias para la
acción, claridad mental y exageración de sus virtudes, determinación de cocaína en orina detectan la
capacidades y habilidades. Se presentan, además, di- presencia de benzoilecgonina, capaz de
latación pupilar, respiración rápida, taquicardia, dis- permanecer en la orina hasta 3 días en los sujetos
minución de la sensación de hambre, sueño y que no consumen la cocaína de forma cróni- ca y
cansancio. Lógicamente por ninguna de estas mani- hasta 7 días en los consumidores crónicos.
festaciones clínicas el enfermo asiste al médico, pues La dosis letal media de cocaína es variable. Por
son las deseadas. vía oral oscila entre 500 y 1 000 mg, sin embargo,
Las complicaciones agudas del consumidor se han existen casos en los que la muerte ha sobrevenido
descrito después de la inhalación (la fumada), in- con una dosis tan solo de 20 mg administrada por
gestión, introducción en los orificios corporales (va- vía intranasal, y por otro lado, los consumidores
gina, recto), vía intranasal (“esnifada”), EV, y cró- nicos llegan a tolerar hasta 10 g diarios sin
resulta- dos negativos.
554
Tratamiento drogas estarían las análogas a las anfetaminas:
El tratamiento consiste, en primer lugar, en reducir metanfetamina o speed, MDA o “droga del
amor”, MDMA o “éxtasis” , MDEA o N-etil
la estimulación del SNC, ya que la mayoría de las
MDA o “Eva“. Cuando se utilizan la anfetamina
manifestaciones clínicas son el resultado de un au-
o la metanfetamina u otras análogas con fines
mento del tono simpático. Las benzodiazepinas cons-
recreacionales, su vía habitual de administra-
tituyen la base del tratamiento. La mortalidad se debe
ción es la oral en forma de tabletas o compri-
principalmente a la hipertermia, que se puede disminuir
midos, aunque en ocasiones también se
en forma notable al utilizar técnicas de enfriamiento “esnifa” o se usa por vía EV (metanfetamina o
rápido, como baños de hielo, y benzodiazepinas EV speed). Recientemente apareció en Hawai y
(diazepam, 20 a 40 mg EV o la dosis necesaria). El California una nueva forma de consumo de la
objetivo es administrar benzodiazepinas hasta que metanfeta- mina fumada en forma de cristales
se normalicen los signos vitales. Debido a que la (ice).
mayoría de los pacientes presentan hipovolemia se- 3. Anorexígenos. Existen en el mercado farma-
cundaria a la hipertermia y taquipnea, el empleo EV céutico sustancias relacionadas con la anfeta-
de suero salino fisiológico o Ringer lactato resulta mina, pero con menor toxicidad: clobenzorex,
una medida útil. Se debe evaluar con rapidez la
dexfenfluramina, fenproporex, anfepramona,
glicemia en sangre y realizar un ECG. Los enfer-
fenfluramina, etc.; todas ellas son medicamen-
mos con hipertermia grave (superior a 41 ºC) deben
tos anorexígenos.
ingresarse en una UCI, pues con frecuencia desarro-
4. Psicotónicos. Aquí se encuentra el
llan complicaciones como rabdomiólisis, coagula-
ción intravascular diseminada y edema cerebral. El metilfenidato o premolina, con distintos usos
resto del tratamiento será sintomático y en él no médicos.
deben emplearse nunca los betabloquedores (pro-
pranolol), ni los neurolépticos para la agitación
Sintomatología
(haloperidol). Las manifestaciones clínicas de la intoxicación
aguda son parecidas a las de la cocaína, pero menos
inten- sas, aunque se han descrito muertes por
ANFETAMINAS intoxica- ción con estas sustancias como drogas de
abuso. Los síntomas más frecuentes de la
Y DROGAS DE DISEÑO sobredosis son irrita- bilidad, alucinaciones,
psicosis tóxica, hipertermia, midriasis, agitación,
DE TIPO hipertensión, taquipnea, arrit- mias cardíacas de
tipo extrasistólico, sudoración pro- fusa,
ANFETAMÍNICO hiponatremia, rabdomiólisis, convulsiones y
coma. La presencia de más o menos síntomas de-
Representan un grupo de sustancias de las que con pende de la dosis, aunque a veces factores idiosin-
frecuencia se hace un uso no médico, con la finali- crásicos modifican la evolución clínica. Sólo la
dad de obtener efectos estimulantes del SNC. Estos fenfluramina y la dexfenfluramina difieren clínica-
productos se comportan como aminas simpaticomi- mente, ya que producen somnolencia que en oca-
méticas de acción mixta y existen distintos compues- siones es intensa. El síntoma más común es la
tos con dicha actividad. agitación, seguido de convulsiones, arritmias car-
díacas e hipertermia. Se han descrito hepatitis tóxi-
1. Sulfato de anfetamina. Esta forma es el único ca en algunos pacientes.
preparado farmacológico de uso médico, prác-
ticamente en desuso. Diagnóstico
2. Drogas de diseño. En algunos países se fabri-
El diagnóstico no es fácil de establecer en función
can de manera clandestina, aunque su grado de
de la clínica o el examen físico, por el parecido de
pureza y los contaminantes con que llegan al
esta sintomatología a otras muchas sustancias que
mercado negro son imprevisibles. Entre estas
producen cuadros adrenérgicos similares. Su deter-
minación en orina es sencilla, aunque habitualmen-
te el paciente confiesa su uso.
555
Tratamiento “estrellas”, “vulcanos”, “micropuntos”, etc. A ve-
El tratamiento consiste en el lavado gástrico y en la ces se vende adulterada con fenciclidina, lo que
administración de carbón activado si se utilizó la vía pro- voca problemas en el manejo terapéutico. De
todas formas es importante conocer que lo que hoy
oral para su consumo y éste fue muy reciente, cosa
en día se vende por LSD a veces no lo es, ya que su
que no suele ocurrir, por lo que la descontamina-
sínte- sis clandestina se realiza a partir del
ción gástrica casi nunca se emplea.
preparado far- macéutico hidrogenomaleato de
La agitación, el delirio y la psicosis tóxica se tra-
metilergometrina, y no resulta fácil obtener
tan con diazepam EV (10 mg), que se repite en caso dietilamida pura del ácido lisérgico, por lo que se
necesario las veces que se considere. También se obtienen sustancias parecidas. En algunos países se
usa el midazolán IM (7,5 a 10 mg), que se puede ha hecho popular el empleo de la denominada
repetir. Por lo general, con la sedación rápida y “droga del amor”o “éxtasis”, que es la MDA (3,4 -
adecuada comienzan a regresar el resto de los metilendioxianfetamina) o mellow drug of
síntomas, como las arritmias, la hipertensión, la América. Ésta comparte las propiedades es-
hipertermia, etc. Será necesario mantener una timulantes de la anfetamina y las alucinógenas (en
adecuada hidratación del paciente. menor medida) de la LSD, produce intensas sensa-
El tratamiento de la hipertermia se hará contro- ciones de acercamiento a los demás y al amor, de
lando la agitación y enfriando al enfermo al máxi- donde deriva su nombre.
mo lo antes posible (baño con hielo); el de las
arritmias que comprometan la hemodinámica, con Manifestaciones clínicas
propranolol, y el de las convulsiones, con diazepam. Los efectos alucinógenos o psicodislépticos varían
La hipertensión que no mejora tras el control de la mucho de unos sujetos a otros. En ocasiones, las
agitación, se trata con captopril, nifedipino o vaso- sensaciones subjetivas son extraordinariamente agra-
dilatadores (nitroprusiato). Ya no se utiliza la diure- dables y en otros casos indeseables (“mal viaje”).
sis forzada ácida para aumentar la eliminación de Los trastornos más frecuentes son los que a con-
las anfetaminas, pues con sedantes y tratamiento sin- tinuación se señalan:
tomático la situación es controlable; además, se
demostró que este proceder podía incrementar el ries-
1. Trastornos del humor, angustia, terror (“mal
go de precipitación de mioglobina por rabdomiólisis
via- je”), euforia.
y la consiguiente insuficiencia renal.
2. Trastornos de la percepción caracterizados por
hiperestesia sensorial, ilusiones, alucinaciones,
sinestesias (ejemplo: oír sonidos de los colo-
ALUCINÓGENOS res), alteraciones de la imagen corporal (ejem-
Y PSICOMÉTRICOS plo: sentimiento de una diferencia de tamaño
entre las dos mitades del cuerpo o variaciones
del tamaño), desdoblamiento de la conciencia,
Éste es un grupo muy amplio de sustancias, pero ingravidez.
sólo se mencionarán los detalles de interés de algu- 3. Trastornos intelectuales: excitación, alteración
nos cuadros tóxicos, pues la mayoría son parecidos de la noción del tiempo y del espacio, ideas
y su tratamiento muy similar. delirantes, confusión mental.
4. Trastornos del comportamiento: reacciones de
LSD-25 pánico (“mal viaje”), pasividad, hiperactividad,
La LSD-25 (dietilamina del ácido lisérgico) es una variables según el estado de ánimo.
droga con acción fundamentalmente alucinógena, se 5. Experiencia mística psicodélica con sensacio-
administra por vía oral y ha habido un incremento nes de éxtasis, infinidad, sentimiento
de su uso en algunos países. Viene por lo general en profundo de alegría, felicidad, amor, paz,
una especie de papel secante o sellos, entre otras sensación de formar unidad con el universo.
presentaciones, y en el argot de los consumidores se Estas experien- cias son consideradas como
le denomina trip, “ácido”, “bichos”, “secantes”, indescriptibles, más allá del mundo de las
palabras; quedan total- mente en suspenso la
razón y el espíritu crítico.
556
Los cuadros clínicos tóxicos con los que asisten
son:
Fenciclidina
a) Reacción paranoide aguda. b) La fenciclidina (PCP, “polvo de ángel” o “píldora
Reacción aguda de ansiedad. de la paz”) se utilizó hace años como anestésico,
c) Conducta agresiva y antisocial. pero fue retirada del mercado por causar alteracio-
nes psíquicas similares a los alucinógenos (LSD-
No suelen ser visibles otros signos físicos impor- 25). En algunos países europeos esta sustancia se
tantes, con excepción de la midriasis, la hiperreflexia, fuma mezclada habitualmente con marihuana,
aunque tam- bién se inhala por vía nasal o se
el temblor, la taquicardia, la hipertensión arterial, y
ingiere por vía oral. Es una sustancia que se
en casos excepcionales, las convulsiones o la hi-
comporta como estimulan- te, depresor,
pertermia. No se han reportado casos directos de
alucinógeno y analgésico, y varía su
muerte por LSD-25, aunque sí accidentes, por las
comportamiento de una persona a otra.
alucinaciones (tránsito) o muertes debidas a su aso- Los cuadros tóxicos originados por ella son por
ciación con otras drogas. lo general muy graves y el paciente presenta coma,
catatonía, depresión respiratoria, hipertermia, agi-
Tratamiento tación, hipertensión, etc. Dentro del grupo de aluci-
Las bases del tratamiento son las siguientes: nógenos es la sustancia que más muertes ha
ocasionado en episodios de intoxicación aguda. Su
a) Frente a un cuadro tóxico por LSD se aconseja presencia se detecta fácilmente en la orina y a dife-
un trato pausado, hablar en voz baja, colocar al rencia de otros alucinógenos rara vez produce
paciente en un ambiente lo más tranquilo posi- midriasis.
ble para que se relaje y tratar de no utilizar Su tratamiento no difiere del de otros alucinó-
sondas gástricas ni carbón activado, pues genos.
incrementarían la agitación y la agresividad.
b) Los cuadros de agitación psicomotora deberán
tratarse con diazepam IM o EV, con las dosis CANNABIS
necesarias para sedarle. Esta sedación debe ser
lo más precoz posible y no se aconsejan medi- (MARIHUANA)
das físicas de restricción (atar, sujetar, fijar con
bandas), pues incrementarían el riesgo de hi- Existen tres preparados fundamentales de la planta
pertermia y rabdomiólisis. Cannabis sativa, que con distintos grados
c) No es aconsejable emplear haloperidol, contienen el principio activo: gamma 9-
clorpromazina, levomepromazina o droperidol, tetrahidrocannabinol
ya que por un mecanismo no esclarecido pro- (9-THC).
ducen hipotensión y fallo hemodinámico al
1. Se denomina marihuana a todas las prepara-
interaccionar con la fenciclidina; además, los
ciones vegetales que están contenidas en las
neurolépticos interfieren con los mecanismos
hojas y las flores; aproximadamente posee al-
de disipación del calor, predisponen a las arrit- rededor del 1 % de 9-THC, o sea, un cigarrillo
mias cardíacas y disminuyen el umbral convul- tiene unos 5 mg de 9-THC.
sivo, por lo que hoy en día se desaconsejan en 2. Con el término de hachís (“costo”, “chocola-
las agitaciones psicomotoras donde esté te”, “mierda”, etc.) se denominan las prepara-
involucrada la LSD, anfetaminas, cocaína, etc. ciones que contienen principalmente la resina,
d) Cualquier otra manifestación física debe con un contenido de 9-THC del 5 %. Es un
ser tratada con las medidas de soporte y ma- terial resinoso, prensado en forma de
sintomáticas habituales, por ejemplo: la lágrimas gruesas, cubos o bolas. Por lo
hipertermia, enfrian- do al paciente con baño general, de color ocre o marrón oscuro.
helado; la rabdomióli- 3. El aceite de hachís se obtiene hirviendo éste
sis, con líquidos abundantes. en etanol u otros solventes, luego se filtra o
se destila, y se consigue un líquido viscoso
con
557
un alto contenido en 9-THC (10 a 15 %). En ción, euforia parecida a la que ocurre en la
Cuba la forma más común de consumo es en intoxica- ción etílica, delirio, confusión mental,
cigarrillos, pero en otros países se utiliza el vértigos, ilu- siones y alucinaciones.
hachís mezclado con tabaco rubio, también para Son empleadas respirando a través de una bolsa
ser fumado (“porro”). cerrada o de un embudo de cartón. El principal ries-
go asociado a su uso es la muerte súbita, posible-
Acciones farmacológicas y tóxicas mente por arritmias cardíacas graves, aunque
Una vez consumido, el 9-THC produce euforia, también se ha señalado que éstas podrían estar ori-
desinhibición, sensación de bienestar, liberación de ginadas por depresión respiratoria o estímulos
impulsos, aumento de sociabilidad y facilidad en la vagales que provocan paro cardíaco. Por ejemplo,
comunicación; aparecen hilaridad absurda e irresis- en el Reino Unido se producen alrededor de 100
tible, con un sentido del humor más agudo, mayor muertes súbitas anuales relacionadas con la inhala-
libertad de imaginación con nuevas asociaciones de ción de sustancias volátiles.
conocimientos e ideas, hiperdinamismo, alteración Los hidrocarburos halogenados mencionados, in-
de la noción del tiempo y modificaciones de la per- halados en forma crónica, causan lesiones hepáti-
cepción espacial, hiperestesia, sinestesias, etc. cas, trastornos de la función renal, arritmias y
depresión cardíaca.
Es una sustancia que apenas produce consultas
Todos los inhalantes en general producen irrita-
en nuestro medio, salvo en ocasiones por reaccio-
ción de las vías respiratorias y de la mucosa
nes de ansiedad y pánico, y menos frecuentes cua-
conjun- tival, y neuropatías periféricas, con
dros psicóticos. Se han descrito casos graves de
parálisis casi nunca reversibles.
intoxicación por ingestión accidental de “bolas” con El tratamiento de los posibles cuadros tóxicos es
cuadro de hipotensión y coma, o por roturas de bol- puramente sintomático.
sas en el interior del recto (“mulas”), que es el siste-
ma utilizado para atravesar las aduanas. Su presencia
se detecta fácilmente en la orina mediante técnicas
cualitativas.
ALCOHOL ETÍLICO
El tratamiento en todos los casos es sintomático O ETANOL
Es difícil que pase un solo día sin que un médico
ABUSO de los servicios de urgencias no atienda a un
DE INHALANTES paciente que padece una intoxicación etílica aguda
o que pre- senta secuelas de abuso crónico del
alcohol. Se ha calculado que 1 de casi 100
Aunque en nuestro país no es una práctica frecuen- personas abusa del al- cohol en gran parte de los
te, sí lo es en algunas poblaciones de adolescentes y países europeos, y en los Estados Unidos más de la
niños de ciertas áreas de Latinoamérica, que abusan mitad de las víctimas de accidentes de tránsito
de ella debido a su bajo costo y su gran accesi- tienen concentraciones de al- cohol en la sangre
bilidad. que superan el límite permitido legal de 100 mg/dl
Las sustancias inhalantes son depresoras del SNC, (0,1 %). Casi todos los sistemas orgánicos se ven
entre las que se destacan los disolventes orgánicos afectados por el abuso agudo y cró- nico del
volátiles que forman parte de las tinturas de zapa- alcohol, pero son el SNC y el hígado los que
tos, pegamentos, colas, pinturas, barnices y correc- padecen mayor lesión. Resulta difícil distinguir el
tores de mecanografías, como tolueno, hexano, daño causado por la intoxicación etílica aguda de la
cloroformo, acetato de etilo, acetona, xileno, benceno, debida al abuso crónico, pues ambas son muy
tetracloruro de carbono, tricloroetileno, diclorofluo- corrientes y las dos coinciden con frecuencia en un
rometano (vehículo de aerosoles), clorofluorometa- mismo paciente. Esta descripción se limitará a la
no, gasolina, etc. Se consumen por vía respiratoria in- toxicación etílica aguda grave.
inhalándolas y su acción es rápida y produce excita- Esta intoxicación varía según el área geográfica,
en dependencia de costumbres y legislaciones de
558
determinados países. Por ejemplo, Rusia, Suecia, 3. Consumo voluntario. Se han descrito ocasio-
España y el Reino Unido exhiben altas tasas de es- nalmente intentos de suicidio o “chantajes
tos tipos de intoxicaciones. En el Reino Unido la emo- cionales” con dosis elevadas de
ingestión de alcohol, por ley, se hace en el transcur- bebidas que contienen alcohol etílico.
so de algunas pocas horas (de las 17 a las 23 horas)
y fundamentalmente el fin de semana. Esto favore- Fisiopatología
ce la ingestión masiva de alcohol y, por lo tanto, la A pesar de que se conoce desde el origen de la his-
aparición de cuadros agudos de intoxicación.
toria escrita, aún no se sabe el mecanismo de
La definición más aceptada de abuso del alcohol
acción que produce la toxicidad aguda del etanol.
es la de “consumo excesivo que afecta la salud del
individuo, perturba sus funciones sociales o bien Se ha planteado que altera las propiedades líquidas
origina ambos fenómenos”. La ingestión crónica de de las membranas lipídicas neuronales, pero lo
dosis altas de alcohol (alcoholismo) causa distintas más pro- bable es que interaccione o altere la
alteraciones orgánicas que no son motivo de análi- función de los receptores de los neurotrasmisores
sis en este capítulo. con acción esti- mulante (NMDA), los
El alcohol es un producto derivado de la fermen- neurotrasmisores con acción inhibitoria (GABA)
tación del azúcar por microrganismos. La fuente de o los neurotrasmisores mo- noaminérgicos
origen del azúcar determinará el producto final. Así,
(dopamina y serotonina). Manifestaciones
la de la uva produce el vino, que contiene alrededor
de un 10 % de etanol. Luego el producto de la fer- clínicas
mentación se altera a través de la destilación, por Las cantidades moderadas de alcohol producen
medio de la cual el etanol y ciertos componentes efec- tos bien conocidos: reducción de la inhibición
volátiles se separan y se concentran. Por ejemplo, la nor- mal que es común tener sobre la conducta
fermentación y la destilación de la baya de enebro y el lenguaje, euforia, sentimiento de confianza en
producen la ginebra, con un contenido etílico aproxi- uno mismo y hacia los demás, etc. Con dosis altas
mado del 40 %. fácil- mente se pasa a la incoordinación muscular
El etanol es un hidrocarburo volátil de bajo peso y del lenguaje, a la reducción de la ideación y la
molecular, insípido e inodoro, y soluble en agua capaci- dad mental, somnolencia, etc. Ninguna de
como otros hidrocarburos. Estas propiedades físi- las mani- festaciones hasta ahora señaladas
cas lo convierten en un componente importante de
constituye un problema médico, simplemente hay
algunos medicamentos y de otros productos domés-
que “dormir la borrachera”.
ticos, como los anticatarrales, los colutorios y las
Al aumentar el grado de intoxicación, se desarro-
colonias. Se le utiliza como medida física para bajar
lla un tipo de conducta incontrolada con manifesta-
la temperatura, y podría, por lo tanto, absorberse de
forma percutánea, sobre todo en niños. Cuando se ciones a veces inesperadas, que dependen de la
administra por vía oral, se absorbe con rapidez en el personalidad del individuo, y cuyas consecuencias
estómago y en el intestino delgado, y se distribuye sí suelen ser previsibles. Tales consecuencias son
por el total del agua corporal (volumen de distribu- por lo general de orden público y no requieren, sal-
ción de 0,6 L/kg). vo excepciones, de asistencia médica urgente.
La intoxicación etílica aguda grave tiene un ori- Dosis muy elevadas en bebedores esporádicos o
gen triple: en alcohólicos crónicos, en ocasiones dan lugar a
manifestaciones clínicas graves que es posible que
1. Consumo social. Es el más frecuente de todos produzcan la muerte.
y se produce en bebedores esporádicos o en al- Como consecuencia de la vasodilatación apare-
cohólicos. cen hipotermias intensas que originan arritmias e
2. Consumo accidental. Es el caso de niños o en- hi- potensión arterial. Es también posible la
fermos mentales que ingieren colonias, antisép- presencia de hipoglicemia, a causa de la
ticos, alcohol del botiquín casero o bebidas hipotermia e inani- ción o sin relación con éstas.
alcohólicas de alta graduación. Su incidencia Algunos casos llegan al coma etílico y a la muer-
es baja o excepcional. te. El riesgo de broncoaspiración provocada por el
vómito siempre está presente y se debe tener en
cuenta,
559
además, la posibilidad de hematomas subdurales acaban de ingerir cerveza regular y metabolizan de
traumáticos que han podido ocurrir por alguna caí- forma rápida grandes cantidades de etanol, se diag-
da durante la embriaguez. nostican a menudo como afectos de intoxicación
La intoxicación etílica grave necesita de una va- etílica aguda debido al olor de su aliento y, sin em-
loración, de un diagnóstico diferencial y de una se- bargo, están sobrios. Por el contrario, a veces no
rie de exploraciones y estudios complementarios que aprecia el olor en el aliento de los que beben ciertos
incluirán la osmolaridad plasmática. Medidas tan alcoholes, como es el de “grano”.
simples como la toma de la temperatura para com- La vasodilatación microvascular y
probar que no hay hipotermia, la tensión arterial para macrovascular causa hipotensión arterial, y
descartar la hipotensión, la exploración cardiológi- predispone a la pérdida o ganancia térmica, lo cual
ca por si existen arritmias, la exploración neuroló- conduce a la hipotermia o hipertermia,
gica básica para hacer diagnósticos diferenciales ante respectivamente, según la temperatu- ra ambiente.
un posible hematoma subdural y la realización de la Dentro de las arritmias cardíacas, las más
glicemia, ayudan a clasificar la gravedad del cuadro frecuentes son las de origen auricular, tanto
clínico. Algunas veces es esencial la determinación extrasístoles como fibrilación auriculares, y se ven
plasmática de las concentraciones de etanol para en pacientes tolerantes y en los no tolerantes. Se
correlacionarlas con el grado de deterioro neuroló- pro- duce, además, una disminución del volumen
gico (estupor o coma) del paciente. Si éste presenta plas- mático circulante debido a un aumento de la
valores superiores a 350 mg/dl, debe haber coma. diuresis provocado por el propio etanol y a la
La falta de correlación (valores inferiores y pre- presencia de vómitos, muchas veces
sencia de coma) suele indicar la ingestión de otros secundarios a grandes ingestiones de etanol, lo
medicamentos o la presencia de otras enfermeda- que es capaz de causar al- teraciones
des, como el hematoma subdural, entre otras. Con- hemodinámicas del tipo de la hipotensión, que
centraciones de etanol superiores a 450 mg/dl son resultan severas cuando concomitan con la va-
capaces de ocasionar la muerte en pacientes que no sodilatación presente en este tipo de intoxicación.
han desarrollado tolerancia al alcohol; en cambio, La depresión respiratoria puede ser la expresión de
los bebedores crónicos que son tolerantes soportan y un cuadro grave cuando ocurre y es de muy mal
sobreviven a concentraciones superiores a 1 000 mg/dl y pro- nóstico. Está relacionada principalmente con
se mantienen con funciones fisiológicas normales la de- presión del SNC, por lo que es muy
con valores de 450 mg/dl. importante considerar este aspecto en el momento
Los síntomas de una intoxicación etílica aguda de evaluar esta intoxicación.
varían de acuerdo con los valores plasmáticos de
etanol y según que el paciente sea un tolerante o no Pronóstico
a éste. Por ejemplo, en concentraciones bajas de al-
Existe controversia sobre la necesidad de determi-
rededor de 100 mg/dl en los individuos no toleran-
nar los valores plasmáticos de etanol para valorar el
tes, se produce estimulación psicomotora y euforia
junto con la disminución de la capacidad de realizar pronóstico de esta intoxicación aguda. En el trata-
actividades motoras finas. A medida que progresa miento de la intoxicación etílica aguda con toma de
la intoxicación y con valores de 200 mg/dl en los la conciencia, sí se hace necesario precisar los valo-
pacientes no tolerantes, se afectan actividades mo- res plasmáticos de etanol, ya sea el paciente tole-
toras simples, como el habla y la marcha, y en la rante o no, con el fin de descartar otras causas,
intoxicación con valores séricos de 300 mg/dl en los sobre todo si la concentración de etanol es baja y
no tolerantes igualmente, se produce coma. no justi- fica la depresión sensorial. La
El olor a alcohol del aliento no se correlaciona concentración de etanol en la sangre se determina
bien con el nivel de la intoxicación, y esto confunde mediante el análi- sis del suero, la saliva o el aire
al médico que evalúa a este intoxicado, ya que este espirado, aunque en esta última valoración se
olor se debe a los congéneres volátiles y a los meta- requiere de la completa cooperación del sujeto.
bolitos del etanol (acetaldehído) y no al etanol en sí. El análisis inmediato de la glicemia es
Los pacientes que consumen cerveza sin alcohol o fundamen- tal, pues la disminución de la
conciencia en la in- toxicación etílica aguda se
toma a veces por la que ocurre en los episodios de
hipoglicemia; además, el
560
etanol inhibe la gluconeogénesis y reduce la capaci- ción de la dieta tan pronto como sea posible,
dad del hígado para almacenar glucógeno, por lo que mejora la concentración de glucosa en el suero y el
el abuso de etanol predispone a cuadros de hipogli- depósi- to de glucógeno hepático. Se ha
cemia. descartado la ac- ción beneficiosa del flumazenilo,
la naloxona y la cafeína en el tratamiento de esta
Tratamiento intoxicación.
Las medidas de soporte y la observación del pacien- La tasa de eliminación varía mucho y es normal-
te con evaluaciones repetidas constituyen la base del mente más rápida en los consumidores crónicos de
tratamiento. En los casos graves de intoxicación es etanol (25 a 40 mg/dl/h) que en los que beben de
necesaria la ventilación mecánica artificial con mo- manera esporádica (10 a 20 mg/dl/h).
dalidades asistidas y es muy importante proteger las El incremento de la eliminación se debe a la in-
vías aéreas en los enfermos con vómitos que no tie- ducción de las enzimas hepáticas microsomales que
nen un adecuado reflejo de protección de éstas. producen el metabolismo oxidativo del etanol. En
Dado que el fallecimiento en esta intoxicación por el caso de que un paciente no tolerante presente ci-
lo general sobreviene por depresión respiratoria, la fras muy elevadas de etanol y el tiempo que necesi-
ventilación artificial y la oxigenación de forma pre- taría para su eliminación fuera excesivo o muy
coz deben tenerse en cuenta como medidas de emer- peligroso esperar (inestabilidad hemodinámica, con-
gencia. Hay que administrar soluciones electrolíticas vulsiones), se debe utilizar una extracción extracor-
glucosadas para el manejo de la depleción de volu- pórea. Aunque la diálisis peritoneal aumenta la tasa
men. El deficiente estado nutricional de un gran gru- de eliminación, la hemodiálisis es mucho mejor,
po de estos pacientes requiere del aporte vitamínico, por lo que constituye el método de elección en estos
especialmente la tiamina en dosis de 100 mg IM o casos. En esta intoxicación no son útiles el lavado
EV diario. Este detalle es muy importante para pre- gás- trico, el carbón activado, la fructosa EV
venir el desarrollo de la encefalopatía de Wernicke, (suero levulosado), la vitamina B6, la cafeína o los
y de la misma forma la administración de suplemen- diuréti- cos, que en algún momento se habían
tos calóricos con sueros glucosados y la incorpora- señalado como
beneficiosos.
561
58
INTOXICACIÓN
POR VENENOS DE ANIMALES
Existen multitud de animales, desde un simple El escorpión o alacrán es un artrópodo muy
mosquito, la araña, pasando por el sapo hasta el frecuente en Cuba, parece un cangrejo de color
desagradable y temido alacrán, que por su contacto pardoamari- llento, tiene una longitud de hasta 8
o picadura producen cuadros tóxicos en el ser hu- cm, presenta dos pinzas en la parte anterior del
mano. tronco y una seudocola movible, en cuyo último
En este capítulo se hará un comentario sobre aque- segmento se en- cuentra un fuerte aguijón, con el
llos que en nuestro país pudieran revestir cierta gra- que ataca la presa clavándola, lo cual realiza
vedad o en raras ocasiones, incluso, provocar la doblando su seudocola hacia arriba y adelante.
muerte. Inocula entonces su veneno.

Animal Características Manifestaciones tóxicas


Rhopalurus junceus (alacrán). Muy parecidos, el primero tiene franjas Dolor, fiebre, escalofríos (ambos).
Centruroide gracilis (alacrán). blancas en el abdomen.
Lactrodectus mactans (viuda negra). Araña que vive debajo de las piedras en Veneno potente, puede matar.
zonas costeras.
Citharacanthus spinicrus (araña Se encuentra en patios, habitaciones del Picadura igual que el alacrán, fiebre y
peluda). campo, debajo de las piedras y en lugares sudoración.
Escolopendra SP (ciempiés). húmedos.
Polistes cubencis (avispa común). Nidos en árboles, paredes de piedra. Dolor, manifestaciones locales.
Apis mellifera (abeja común). Nidos en árboles cerca de las flores. Igual.
Feidole megacephala (hormiga En cualquier sitio, alto contenido de Dolor, rubor.
brava). ácido fórmico.

Se incluirán igualmente las mordeduras de víbo- Es de vida frecuentemente nocturna, se halla en


ras o culebras y una entidad, que aunque no es pro- paí- ses cálidos de las zonas tropicales y
ducida de forma directa por un animal, sí es subtropicales y ocasiona problemas de salud
trasmitida por los peces al ser ingeridos; es el caso pública en regiones como México, Brasil, Arabia,
de la ciguatera, frecuente en nuestro medio por ser Irán, Israel, etc.
Cuba un archipiélago.
El veneno de los alacranes, caracterizado por su
gran actividad neurotóxica y cardiotóxica, contiene
proteínas de bajo peso molecular; altera la trasmi-
PICADURAS sión nerviosa, en especial a nivel de la unión neuro-
POR ALACRÁN muscular, al modificar la permeabilidad iónica de
las membranas.
O ESCORPIÓN Los efectos musculares (fibrilaciones, sacudidas
y parálisis) son fundamentalmente consecuencias
De todos los artrópodos existentes, quizás los ala- de las acciones presinápticas del veneno, aunque
cranes son los que más interés toxicológico tienen. no puede descartarse en su totalidad una acción
muscu- lar, como por ejemplo, sobre el músculo
cardíaco.

562
Cuadro clínico pam IM si hay espasmos musculares. Se ha reco-
Tras la picadura del alacrán se produce de forma mendado el uso de la neostigmina, de 0,5 a 1 mg
constante un cuadro de dolor en la zona de la lesión cada 8 h, en la picadura por viuda negra.
o irradiado a todo el miembro, inflamación local e
intranquilidad; estas manifestaciones dependen del
sistema más afectado, lo que a su vez estará en rela- PICADURAS
ción con el tipo de toxina o especie de alacrán
involucrado. POR HIMENÓPTEROS
La evolución posterior dependerá de la región
geográfica, la estación del año, la especie animal y (ABEJAS Y AVISPAS)
el estado funcional o fisiológico general del pacien- Genéricamente, estos insectos se caracterizan por
te accidentado. presentar en la parte distal de su abdomen, un agui-
En niños se ha encontrado edema pulmonar no jón que a manera de aguja hipodérmica sirve para
cardiogénico y cardiogénico con galope, lo que agra- que el animal, cuando es irritado, inocule el veneno
va el pronóstico. a través de la piel de la persona atacada. La
diferen- cia entre el aguijón de la abeja y el de la
Tratamiento avispa es- triba en que el de la primera presenta
Aplicación local de frío o anestésico en la zona de unas lengüetas laterales a manera de arpón, de
la picadura y utilización de analgésicos. forma tal que cuan- do pica, queda clavado y se
En otros países, donde la toxicidad de la especie desprende del abdomen conjuntamente con el saco
es muy elevada, se utilizan sueros antivenenos, y en y la glándula que contie- ne y produce el veneno.
regiones o zonas donde son muy frecuentes las pi- Ocurrido este hecho, la abeja muere, no así la
caduras, se emplean vacunas. avispa.
El veneno de éstos está compuesto por distintas
sustancias: a) En la abeja por una mezcla de
PICADURAS melitina, histamina, fosfolipasa A y hialuronidasa
fundamen- talmente; se considera como un agente
DE ARAÑAS terapéutico valioso con actividad radioprotectora y
antinflama- toria. b) El veneno de la avispa está
Generalmente las arañas producen picaduras que sólo formado por dopamina, serotonina, histamina,
determinan dolor local al ser inoculado el veneno, fosfolipasa y cinina.
aunque algunas variedades ocasionan lesiones ne-
cróticas, a veces de mucha gravedad. Entre ellas está Cuadro clínico
la viuda negra (Lactrodectus mactans), cuyo vene- Varía de acuerdo con la hipersensibilidad local y
no es neurotóxico y causa espasmos musculares, sis- témica. Es posible que el paciente esté
dolor intenso en el sitio de inoculación, HTA, y au- sensibilizado al veneno, por lo que en ocasiones se
mento de la secreción nasal, lagrimal y salival. producen cua- dros graves de anafilaxia por una
Laxosceles lacta (araña parda) constituye un pro- sola picadura; sin embargo, también ocurren
blema de salud en algunos países como Perú y Bra- cuadros tóxicos sistémi- cos graves debido a un
sil, y es capaz de producir cuadros de necrosis en el mecanismo inmunológico, aunque este hecho sólo
sitio de la picadura (necrólisis) y manifestaciones sucede tras múltiples pica- duras (ataque de una
colmena).
generales como hemólisis, hemoglobinuria, icteri-
cia y verdaderos cuadros de insuficiencia renal agu-
Reacciones locales
da (IRA), a veces con evolución fatal.
En el momento de la picadura se produce una
Tratamiento sensa- ción de prurito y ardor intenso, seguidos
Analgésicos, hasta llegar al uso de meperidina, que de dolor violento; aparece edema local hasta de 10
puede repetirse si persiste el dolor, cada 8 h. Diaze- cm alre- dedor de la picadura, de carácter grave si
afecta la laringe o faringe. Se han descrito casos de
asfixia.
563
Reacciones de anafilaxia
En función de la hipersensibilización del paciente MORDEDURAS DE
se podrán producir manifestaciones leves (urticaria
y prurito), moderadas (angioedema, broncoconstric-
VÍBORAS O CULEBRAS
ción, edema facial, etc.) y graves (disnea, debilidad,
hipotensión y shock). Características
Es habitual la aparición de náuseas, vómitos y En nuestro país no existe ninguna especie de ser-
diarreas. En casos de picaduras múltiples (centena- piente venenosa, pero se han reportado casos aisla-
res de abejas) se han descrito otras manifestaciones dos de mordeduras de culebras con manifestaciones
de origen no inmunológicas, entre ellas dolor de ca- clínicas importantes.
beza, fiebre, espasmos musculares, convulsiones e Las serpientes de la familia Viperidae, del orden
IRA y muerte. ofidio, se caracterizan por tener en su boca unos
colmillos acanalados, que comunican con un recep-
táculo donde se acumula el veneno producido por
Tratamiento una glándula secretora específica, el que se inocula
General del paciente no complicado: a la víctima cuando es mordida.
1. Extracción del aguijón evitando cualquier pre- Todas las víboras tienen un dibujo en zigzag en
sión sobre la vesícula glandular. Si la picadura el dorso del cuerpo, cabeza triangular poco
es única, se debe colocar un trozo de hielo so- marcada, ojos redondos con la hendidura pupilar
bre ésta, pues el frío evita la difusión del vene- vertical y las placas coriáceas de la cabeza de
no y, al mismo tiempo, calma el dolor por mayor tamaño que las del resto del cuerpo.
La mordedura de estas serpientes se caracteriza
acción anestésica local; si es múltiple, se reti-
por presentar dos orificios puntiformes, separados
rarán las vesículas o aguijones con una maqui-
por 1 cm, lo que la diferencia de la mordedura de
nilla regular con cuchilla no eléctrica. otras culebras, en que queda marcada toda la denta-
2. Administración de antihistamínicos por vía oral; dura.
disminuirán el dolor y el prurito. El veneno de las víboras y culebras contiene en
3. Aplicación de corticoides en pomada sobre la proporciones variables enzimas proteolíticas, sustan-
picadura. cias necrotizantes coagulantes, anticoagulantes o
4. Tratamiento de la anafilaxia con adrenalina, 0,3 ambas, y algunos neurotóxicos. Las sustancias pro-
a 0,5 ml SC, o 0,01 ml/kg; si persiste el shock, teolíticas (hialuronidasa) contribuyen a la disper-
valorar la vía EV (no más de 0,3 ml); difenhi- sión del veneno por los tejidos, y justifican las
dramina IM o EV, glucocorticoides, aminofili- manifestaciones locales de la mordedura.
na si hay broncospasmo y soporte de funciones La cantidad inoculada es muy variable y
vitales en caso de compromiso respiratorio. depende del tiempo transcurrido desde que la
víbora haya inoculado el veneno a otra presa,
atacada previamen- te. Como máximo, inyectan de
A toda persona sensibilizada se le debe sugerir
6 a 18 ml de veneno, por lo que casi nunca son
que tome las siguientes precauciones, a fin de evitar mordeduras mortales, a no ser cuando el atacado
la anafilaxia por la picadura de estos insectos: sea un niño de corta edad o bien una persona
inmunodeprimida.
1. Al salir al campo llevar los alimentos bien ta-
pados. Cuadro clínico
2. No manipular árboles o arbustos florecidos. La mordedura de una víbora o culebra suele afectar
3. No llevar ropas de colores brillantes. la parte distal de una extremidad, aunque en
4. No caminar descalzos sobre el césped florecido. ocasio- nes se produce en la cara, cuello u otras
5. No usar perfumes fuertes cerca de colmenas. zonas.
6. No realizar labores de jardinería. Los síntomas, en los casos leves o moderados,
son: dolor local, equimosis alrededor de la lesión,
edema de la extremidad (puede durar varias
semanas), compresión vasculonerviosa por el
edema, flictenas,
564
necrosis, adenopatías dolorosas, linfangitis o trom- deben hacerse pruebas cutáneas y administrar-
boflebitis. Como síntomas generales aparecen mareos, se esteroides.
dolor abdominal, diarreas, coagulación intravascu- 11. Tratar convencionalmente las complicaciones
lar diseminada (CID), hemólisis, IRA, convulsiones, (CID, IRA, rabdomiólisis).
rabdomiólisis, coma y shock.
El riesgo de muerte, a pesar de la creencia popu-
lar, es escaso (4 %) y el cuadro remite en horas o CIGUATERA
días.
La ciguatera es una forma común de intoxicación
Tratamiento por mariscos y es endémica de los trópicos y
Se basará en los siguientes aspectos: subtrópicos debido al consumo de peces ciguatos.
La enfermedad es causada por toxinas producidas
1. Tranquilizar al paciente y familiares, pues se por ciertos dinoflagelados que viven en detritus y
crea un verdadero drama de terror. en las macroalgas asociadas a sistemas de arrecifes.
2. El enfermo asintomático se observará duran- Las toxinas responsables de la ciguatera son: cigua-
te 8 h, y el que presente síntomas debe ingre- toxina-1, maitotoxina, escaritoxina, palitoxina, el
sarse y observarse por 48 h. ácido okadaic, y posiblemente otras. Éstas se acu-
3. No hay que hacer incisión o succión, ni colo- mulan en la cadena alimentaria marina y hacen más
car hielo directamente sobre la lesión (el frío tóxicos a los peces más grandes. Se ignora por qué
excesivo favorece la necrosis de la herida), ni el pez no se afecta por las toxinas y sí algunos ani-
un torniquete apretado como antes se sugería. males, que incluyen varios mamíferos, aves, repti-
4. Desinfectar la herida. les, anfibios, insectos y hasta ciertos peces.
5. Inmovilizar el miembro afectado en posición Se reporta más toxicidad de estas toxinas en al-
funcional, ligeramente elevado, de forma que gunas islas tropicales, donde es mayor la fuerza de
se facilite el retorno venoso y disminuya el las olas al dañar a los arrecifes en los que se
edema. encuen- tran macroalgas; las tormentas o ciclones
6. Administrar analgésicos (paracetamol, 500 mg tropicales con lluvias abundantes, terremotos y olas
a 1 g c/8 h, VO); no se aconsejan los salicila- gigantes- cas, preceden a los brotes de ciaguatera;
tos, por la posibilidad de afectar la coagula- los arreci- fes ciguatos pueden luego
ción (recordar que estos pacientes pueden permanecer tóxicos durante muchos años.
sufrir CID). Los vectores actuales para la enfermedad son los
7. Administrar antihistamínicos para el prurito y peces semipelágicos y los que habitan en los arreci-
la linfangitis local: difenhidramina, 25 o 50 mg fes coralinos; entre ellos se encuentran la aguja,
c/8 h, IM o EV; los esteroides no son aconse- pez volador, pez vela, barracuda, dorado, picúa, etc.;
jados y se reservan para los pacientes a quie- aquí intervienen sus hábitos de alimentación,
nes se les indique algún suero antiofídico o donde se involucran los herbívoros que consumen
los dinofla- gelados, así como los que forman parte
que desarrollen cuadro de anafilaxia tras la
de la cadena alimentaria (piscívoro).
administración de éste.
Aunque es endémica de los trópicos y
8. Efectuar profilaxis antitetánica y antibiótica:
subtrópicos, actualmente la ciguatera se reporta en
amoxicilina, 500 mg c/8 h o ceftriaxona, 1g
áreas no tro- picales.
por vía IM o EV c/ 24 h. En los pacientes
Es difícil predecir la prevalencia, pues las esta-
alér- gicos a ambos, ofloxacino oral o dísticas no son confiables al presentarse en muchos
vancomici- na + aminoglucósidos, parenteral. países del tercer mundo, aunque es frecuente en
9. La fasciotomía está indicada sólo si hay sig- Cuba, Santo Domingo, Puerto Rico, la costa sur de
nos de compromiso vascular. los EE.UU. y algunos países con costas o mares
10. El uso de sueros antiofídicos debe ser bien indopacíficos (Hawai). Las poblaciones más afecta-
razonado por los posibles riesgos de su admi- das son los turistas y los que practican la pesquería
nistración (anafilaxia). Si se decide su empleo, en estas zonas reportadas.
565
Fisiopatología reagudizaciones, a veces cuando se ingieren maris-
Cada toxina tiene un mecanismo fisiopatológico di- cos o bebidas alcohólicas, nueces y semillas; se han
ferente y complejo, pero en sentido general, todas reportado recaídas tras la ingestión de carne de po-
llo, huevo y pescado enlatado.
inducen la despolarización de la membrana en los
nervios al abrir los canales del calcio. Entre otros síntomas se incluyen: exacerbación
del acné, hipo, sialorrea, fotofobia, sabor metálico
Cuadro clínico en la boca, oftalmoplejía, agitación, delirio, paráli-
sis de los músculos faciales, espasticidad muscular,
Se han reportado más de 175 síntomas, que se agru- hiporreflexia, lesiones cutáneas, ceguera temporal,
pan en tres categorías fundamentales: gastrointesti- caída del pelo, uñas y descamación de la piel.
nales, neurológicos y cardiovasculares.
La duración, severidad y orden de ocurrencia va- Tratamiento
rían considerablemente en cada paciente según la Se puede utilizar el carbón activado (1 g/kg de
cantidad y porción de pescado ciguato ingerido peso), el que adsorbe las toxinas que aún se
(cefálico-caudal). mantienen en el tractus digestivo.
La enfermedad comienza a veces aun antes de que El manitol EV es el tratamiento de opción, pues
finalice la comida, pero por lo general se inicia den- mejora mucho los síntomas; para ello se aconseja
tro de las primeras 12 horas. primeramente rehidratar al paciente de las pérdidas
Síntomas gastrointestinales. Náuseas, vómitos, sufridas por las diarreas y vómitos con Ringer
diarreas y dolor abdominal lactato o suero salino, según el grado de
Síntomas neurológicos. Disestesias; parestesias, deshidratación. La dosis de manitol al 20 % es
que son típicas en la región perioral, lengua, partes de 1 g/kg, en 1 h, por día.
distales de las extremidades, sobre todo en las pal- Se ha utilizado el gluconato de calcio al 10 %,
mas de las manos y plantas de los pies. La disestesia EV, administrado c/8 h durante la fase aguda y pos-
habitual es la sensación de quemazón en las extre- teriormente por vía oral en el tratamiento ambulato-
midades o boca cuando se toma una bebida fría. rio, pues en el caso de la ciguatotoxina se piensa
Se ha descrito también ataxia, prurito, disminu- que inhibe la absorción de calcio mediante mem-
ción de la fuerza muscular en los miembros inferio- branas excitables y este aporte pudiera mejorar la
res y sensación de pérdida de los dientes. sintomatología.
Síntomas cardiovasculares. Hipotensión arterial, El resto del tratamiento es sintomático; para los
bradicardia, bloqueo A-V, shock. síntomas crónicos, que a veces duran semanas o
La mortalidad es escasa (0,1 %) y siempre ocurre me- ses, se ha recomendado la amitriptilina, 25
por fallo respiratorio. mg 2 veces al día. No se aconseja la
Las manifestaciones neurológicas se prolongan administración de esteroides, opiáceos o
semanas o meses y se presentan remisiones y barbitúricos.
566
59
OTRAS INTOXICACIONES
HIDROCARBUROS máticos (xileno, benceno o tolueno), aunque
también se produce por derivados del petróleo
como la gasolina. Los síntomas incluyen letar-
Los hidrocarburos (alifáticos, halogenados o aromá- gia, irritabilidad, estupor y coma.
ticos) son un amplio grupo de sustancias químicas 3. Aparato respiratorio. Por lo general estas ma-
con múltiples aplicaciones industriales. De todas nifestaciones se deben a la aspiración de los
ellas sólo se tratarán los destilados del petróleo. derivados del petróleo. Los síntomas varían
Petróleo y sus derivados desde tos e irritación de las vías aéreas, hasta
disnea refractaria, cianosis y coma. Los deri-
Los derivados del petróleo son la causa más frecuente vados de baja densidad producen neumonitis,
de intoxicación dentro del grupo de los hidrocarbu- mientras que los de alta densidad (grasas), una
ros. Además de su empleo como combustible, algu- neumonía lipídica. En la auscultación se de-
nos de ellos forman parte de la composición de las tectan estertores roncos, sibilantes y crepitan-
pinturas (sobre todo a “pistola”), barnices, aceites o
tes, aunque muchas veces estos hallazgos
grasas de automóviles. La dosis tóxica es muy difí-
auscultatorios son mínimos. Las alteraciones
cil de establecer, pero parece que por debajo de 1
en la radiografía de tórax tardan en aparecer
a 2 ml/kg no aparecen efectos sistémicos tras su in-
entre 30 min y 12 h, se hacen más evidentes a
gestión oral.
las 72 h del accidente tóxico y disminuyen en
DERIVADOS DEL PETRÓLEO los días siguientes, aunque en ocasiones per-
manecen durante varios meses. Los principa-
Y OTROS HIDROCARBUROS les patrones son infiltrado basal bilateral (en
Aguarrás Queroseno el 65 % de los casos), infiltrado basal derecho
Benceno Nafta (en el 30 %) o infiltrado parahiliar (en el 5 %).
Fueloil Parafina
Gasolina Xileno A veces se observa atelectasia o derrame pleu-
Gasoil Tolueno ral. Muchos pacientes están asintomáticos y
Diesel muestran alteraciones radiológicas (35 %) y vi-
ceversa. Habitualmente esta neumonía cura
Manifestaciones clínicas entre los 7 y los 14 días.
Básicamente se han descrito las siguientes manifes- 4. Aparato cardiovascular. En muy pocas
taciones clínicas: ocasio- nes se han descrito cuadros de
1. Aparato digestivo. Los síntomas digestivos apa- insuficiencia car- díaca y arritmias.
recen en primer lugar, aunque suelen ser esca-
sos (a no ser que el producto contenga, además, Tratamiento
algún cáustico) y se caracterizan fundamental- El tratamiento se basa en los siguientes principios:
mente por sensación de ardor y quemazón en
la boca. 1. Está contraindicado inducir la emesis o reali-
2. Sistema nervioso central. La depresión del SNC zar lavado gástrico, por el riesgo de aspiración
ocurre sobre todo por los hidrocarburos aro- y la consiguiente neumonitis (se debe tener en

567
cuenta que volúmenes mínimos de hidrocarbu- padecen los obreros de las industrias que manejan
ros producen esta complicación pulmonar). dióxido de manganeso o pirolusita. Se describirá
Sólo se efectuarán estas medidas eliminadoras sólo la primera.
del tóxico cuando se hayan ingerido cantida-
des masivas (intentos de suicidio) de gasolina Cuadro clínico
o queroseno (varios ml/kg en el adulto), y en la El permanganato de potasio concentrado es cáusti-
ingestión de derivados del petróleo que ade- co, y los síntomas de la intoxicación derivan de la
más contengan insecticidas, anilina, metales pe- agresión a la mucosa de la vía digestiva alta tras su
sados (excluyendo el plomo que posee la ingestión. Produce un cuadro gastroentérico grave
gasolina, que es muy pobre), benceno, tolueno que lleva rápidamente al enfermo al colapso
o xileno. De realizar el lavado gástrico, se debe cardio- circulatorio por deshidratación y trastornos
proteger la vía aérea mediante intubación. El electro- líticos. Cuando la agresión a la mucosa
carbón activado no es útil para los derivados
digestiva tiene suficiente intensidad, se presentan
del petróleo. Es aconsejable administrar antie-
hemorra- gias (hematemesis y melena), con
méticos potentes por vía EV (ondansetrón,
anemia y shock. Pueden ocurrir perforaciones
metoclopramida), para evitar que el paciente
esofágicas, gástricas y rara vez del intestino, lo
vomite.
que causa cuadros de mediastinitis y peritonitis. Si
2. Una de las prioridades en esta intoxicación agu-
el enfermo sobrevive, presenta con frecuencia
da es el tratamiento de la insuficiencia respira-
como secuela estenosis eso- fágica cicatrizal,
toria. Si ésta se produce, el examen físico
gastritis, etc.
determinará si sólo se oxigenará o será necesa-
ria la intubación endotraqueal y la ventilación Tratamiento
mecánica posterior. En el caso de que haya que
El inicial consiste en la dilución del tóxico
recurrir al uso de broncodilatadores, el salbu-
adminis- trando leche, agua albuminosa o
tamol en aerosol será la primera opción, y la
simplemente agua. No es recomendable inducir
segunda, la aminofilina. No se aconseja em- emesis ni se realiza- rá lavado gástrico por los
plear la adrenalina de haber broncospasmo, por riesgos. El carbón activa- do no se aconseja, pues
el peligro de sensibilizar al miocardio a las ca- dificulta la visualización mediante fibroscopia
tecolaminas. endoscópica, la cual se preco- niza en la actualidad
3. El empleo de esteroides no se recomienda, aun- siempre que se ingieran sus- tancias con efectos
que existen defensores de su uso. El de anti- cáusticos, para determinar la magnitud de las
bióticos se deberá reservar, transcurridas 24 lesiones en la mucosa, que van des- de un simple
a 48 h del accidente, para el tratamiento de las eritema hasta ulceraciones, necrosis, e
neumonías bacterianas o ante la progresión de incluso perforación.
las lesiones radiológicas en presencia de leu- El uso de esteroides para evitar la estenosis eso-
cocitosis y fiebre. fágica es controvertido en la actualidad, y se justifi-
En ningún caso está indicada la endoscopia, pues ca en caso de quemaduras esofágicas, o gastritis de
en general no son cáusticos. consideración. Tradicionalmente se ha utilizado la
prednisona en dosis de 1 a 2 mg/kg/d. Se indicarán
los antibióticos cuando se produzcan evidencias
PERMANGANATO clí- nicas de infección.
Los analgésicos, las medidas de sostén, la
DE POTASIO reposi- ción hídrica, la oxigenación, la
permeabilización de la vía aérea y la ventilación
artificial, son parte im- portante del tratamiento.
Existen dos tipos clínicos de intoxicación por per-
manganato de potasio: la aguda, que se observa tras
la ingestión accidental o con fines suicidas de per-
manganato de potasio concentrado, y la crónica, que FÓSFORO
El fósforo existe en dos formas: una no venenosa,
el rojo, y otra muy tóxica, liposoluble, el amarillo
o
568
blanco. El primero de ellos no se absorbe, por eso mucosas, oliguria y albuminuria, arritmias cardíaca
no es tóxico; sin embargo, el blanco o amarillo es y respiratoria, tras lo cual de manera progresiva cae
un veneno celular altamente tóxico. El fósforo blan- en coma hasta la muerte.
co (P4) se utiliza como rodenticida, fertilizante y en Existe una forma nerviosa, rápidamente mortal en
pirotecnia; como rodenticida se usa por lo general unas 12 h, caracterizada por atonía de los
como fosfuro de zinc, que libera fosfamina o fosfino miembros, calambres dolorosos, somnolencia
y zinc cuando se pone en contacto con agua o ácido.
seguida de exci- tación extrema, delirio, gritos y
La dosis letal del fósforo oral es de 1 mg/kg, mientras
que con el fosfuro de zinc se necesitan 40 mg/kg. convulsiones, hasta terminar todo en un cuadro de
La intoxicación por fósforo tiene dos formas clí- coma, y una forma hemorrágica, en la que
nicas de presentación: aguda y crónica. predominan la hematemesis, melena, epixtasis,
La forma aguda es causada por la ingestión de hematuria, metrorragia, púrpura y equimosis
fósforo (cerillas de fósforo blanco, pasta eléctrica) subcutáneas.
o por inhalación de gases que lo contienen (gases de La forma crónica se caracteriza por enteritis re-
guerra, combustión de carburo de calcio con impu- belde, astenia, inapetencia, subictericia y hemorra-
rezas de fosfato de calcio para producir acetileno, gias. Se considera como lesión típica la necrosis
que desprende hidrógeno fosforado, muy tóxico). parcial del maxilar inferior.
La forma crónica es excepcional en la actualidad. Anatomopatológicamente la alteración más im-
portante es la degeneración grasa de las vísceras
Patogenia (hí- gado y riñones) y de los músculos (corazón).
El fósforo es absorbido por el intestino en forma de
partículas finamente divididas, en solución oleosa. Fosfuro de zinc
Produce ulceraciones que evolucionan de manera Produce náuseas y vómitos, excitabilidad, escalo-
tórpida y cicatrizan con mucha dificultad. Las que- fríos, tos, hipotensión, arritmias cardíacas, convul-
maduras forman ácido fosfórico, lo que las hace en siones, coma, lesión renal, tetania por
extremo dolorosas y de difícil cicatrización. hipocalcemia, leucopenia y muerte.
El fósforo actúa sobre el citoplasma celular y causa
degeneración grasa debido a la lentitud de las oxi- Tratamiento
daciones celulares. La glucogénesis hepática dismi-
Se efectuará un lavado gástrico completo en caso
nuye, mientras que el ácido láctico de los tejidos
aumenta. Los materiales grasos de degeneración son de intoxicación aguda, con precaución.
ricos en lecitinas procedentes de los núcleos celula- En caso de fósforo amarillo o blanco se aconseja
res, los cuales pasan a la sangre bajo la forma de un lavado con permanganato de potasio (al 1 x 5
ácidos grasos no saturados. 000) o peróxido de hidrógeno (agua oxigenada al 2
%), que convierte el fósforo en óxidos menos
Cuadro clínico tóxicos. Se puede administrar carbón activado,
aunque éste tie- ne muy poca afinidad por el
Fósforo amarillo
Después de un período de tiempo variable desde su fósforo. No se debe in- ducir la emesis por su
ingestión, aparecen cefalea, constricción faríngea y efecto cáustico.
vómitos, en ocasiones hemorrágicos, diarreas y En caso de contaminación ocular o cutánea, se
tenesmo. Es típico el olor a ajo en el aliento y la lavará abundantemente con agua y se retirará la
fosforescencia en la oscuridad de la materia vomita- ropa del paciente; si es por inhalación, administrar
da, la orina y las heces. oxí- geno. Las técnicas de depuración extrarrenal
Si el enfermo no fallece, aparece una falsa mejo- no son útiles. Tampoco tiene antídoto.
ría que dura unos días y va seguida de ictericia, he- El resto del tratamiento es sintomático, que in-
patomegalia dolorosa, hemorragias cutáneas y cluye la valoración de las lesiones cáusticas por en-
doscopia, uso de omeprazol, tratar el
broncospasmo o el edema pulmonar si aparecen, y
reposición del calcio si lo necesita.
569
ARSÉNICO conducción AV, prolongación del QT,
taquicar- dia ventricular, edema agudo del
pulmón car- diogénico o no cardiogénico,
Etiología hipotensión y muerte. Todo esto aparece en
El arsénico es un metal pesado que existe en el mer- poco tiempo o demora varios días.
cado de algunos países en distintas formas, capaz de 3. Manifestaciones neurológicas. Entre otras: de-
originar cuadros tóxicos. Entre sus compuestos lirio, desorientación, agitación psicomotora,
inorgánicos se encuentran el trióxido de arsénico o convulsiones, disestesias dolorosas, parálisis
“arsénico blanco”, el pentóxido de arsénico, el muscular que incluye la de los músculos
arsenato sódico o potásico, el arsenito y otros. Hay respi- ratorios, así como una posible
además formas orgánicas consideradas menos tóxi- neuropatía sen- sitivomotora semanas después
cas, como el melarsopol. La más tóxica es la gaseo- de la ingestión de una sobredosis.
sa y se denomina arsina (hidrógeno arseniado o 4. Otros síntomas. Se ha descrito la aparición de
arsenamida). unas líneas blancas en las uñas (líneas de
El arsénico se utiliza como rodenticida, conser- Mees- Aldrich) meses después de la
vante de madera, herbicida, fungicida, en compues- intoxicación. Oca- sionalmente hay
tos para la fabricación de vidrio, etc. La arsina se pancitopenia periférica, rabdomiólisis,
emplea en la fundición y refinación de metales, el aplasia medular o caída del pelo. Algunos
galvanizado y en la industria microelectrónica. La compuestos de arsénico son radiopa- cos y
toxicidad crónica se observa en los trabajadores de capaces de ser visualizados en la radio- grafía
industrias con niveles elevados de este metal. simple del abdomen .
Fisiopatología
Intoxicación aguda por arsina
El arsénico interrumpe las vías metabólicas, sobre
El cuadro aquí difiere del expuesto, pues al carecer
todo la responsable de la respiración hística inhi-
este producto de efecto irritante, no produce sínto-
biendo la fosforilación oxidativa; como consecuen-
mas de forma inmediata y casi no se percibe olor
cia se producen efectos a nivel de muchos órganos y
alguno, salvo en algunos casos, en que sí hay olor a
sistemas. El organismo, sin embargo, trata de con-
ajo en el ambiente. Luego de 2 a 24 h, aparece un
trarrestar esta situación sustituyendo el arsénico por
cuadro de hemólisis grave cuyos síntomas
el fósforo, éste último gran responsable de la inhibi-
tempranos incluyen cefalea, debilidad, disnea,
ción de la fosforilación oxidativa.
dolor abdomi- nal, hemoglobinuria e ictericia. La
Cuadro clínico oliguria y la in- suficiencia renal se presentan de 1
a 3 días después de la intoxicación.
Los síntomas de intoxicación aguda aparecen en
minutos o muchas horas después de la ingestión de Intoxicación crónica por arsénico
entre 100 a 300 mg de arsénico, aunque también es Ésta causa efectos sistémicos: astenia, gastroenteri-
posible la inhalación de polvo de arsénico o la ab- tis, leucopenia, anemia, elevación de las transami-
sorción cutánea. nasas, hipertensión portal no cirrótica, neuropatía
Las manifestaciones clínicas difieren si es arséni- periférica, líneas de Mess-Aldrich, etc. Se han des-
co o arsina. crito alteraciones cutáneas 3 a 7 años después de
Intoxicación aguda por arsénico una exposición prolongada (hipopigmentación e hi-
1. Manifestaciones digestivas. Es frecuente la perpigmentación de la piel, hiperqueratosis, etc.) y
gastroenteritis hemorrágica (el trióxido de ar- cáncer del pulmón en quienes inhalan crónicamente
sénico es cáustico y se adhiere grandemente a arsénico. Se han reportado otras neoplasias en la
la mucosa gástrica), aunque a veces sólo apa- vejiga, el riñón y el hígado.
recen náuseas, vómitos y el típico olor a ajo en
el aliento, dolor abdominal y diarreas líquidas. Pronóstico
2. Manifestaciones cardiorrespiratorias. Se pre-
Es una intoxicación potencialmente mortal, aunque
sentan miocardiopatía dilatada, trastornos de la
el paciente permanezca horas e incluso días sin sín-
tomas. Además de los exámenes de sangre, siempre
570
será necesario un estudio radiológico del abdomen agente reductor y desulfurante en la obtención de
para confirmar el diagnóstico y orientar hacia una acero), industria eléctrica, operaciones de soldadu-
posible cirugía. ras, fabricación de fibras secas, industria química
(utilizado como catalizador), industria del vidrio y
Tratamiento cerámica (como colorante), algunos pesticidas, adi-
Se efectuará un lavado gástrico y se adminisitrará tivos alimentarios, productos farmacéuticos, secante
carbón activado, aunque este último tiene poca afi- de pinturas, conservación de la madera y tratamien-
nidad por el arsénico. Se ha propuesto en algunos to del cuero.
casos el lavado intestinal total, aunque por la capa-
cidad de adhesión del arsénico a la mucosa digesti- Manifestaciones clínicas
va se desconoce su eficacia real. Se mantendrá muy El manganeso se absorbe por vía digestiva y respi-
bien hidratado al paciente para evitar la rabdomióli- ratoria; una vez en el plasma, se fija a la
sis y se aconseja que parte de los líquidos sean bi- transferrina principalmente y se distribuye por todo
carbonatados. el organis- mo, donde se le encuentra en
El antídoto de elección es el BAL o dimercaprol, 3 concentraciones ele- vadas en hígado, riñón y
a 5 mg/kg por vía IM cada 4 a 6 h, inicialmente de 3
glándulas endocrinas. Atraviesa la barrera
a 5 d y luego cada 8 a 12 h durante 7 a 10 d, o hasta
hematoencefálica y placentaria, y sus efectos
que desaparezcan los síntomas. Su administración
neurológicos es probable que se deban a la
no debe demorarse y se aconseja su empleo en los
disminución de dopamina y serotonina que pro-
pacientes sintomáticos y asintomáticos que han in-
gerido una dosis tóxica o si se cuantifican arseniurias ducen en ciertos núcleos grises de la base. Se
superiores a 200 mg/L. excre- ta de manera fundamental por vía biliar.
El similar del BAL es el ácido dimercaptosuccí- La intoxicación puede ser:
nico (DMSA) o succímero, que también es eficaz y
menos tóxico. En los casos de intoxicación aguda a) Aguda. Ocurre por la inhalación de humos de
grave o en la crónica, se recomienda también un ré- manganeso, que causan desde un cuadro
gimen oral de penicilamina de 250 mg cada 6 h. seudogripal hasta una neumonía química grave.
Ninguno de estos antídotos es eficaz en la intoxica- b) Crónica. En este caso se encuentran
ción por arsina, en la cual debe transfundirse sangre alteracio- nes neurológicas, respiratorias y de
por la hemólisis o realizar una exanguinotransfusión. la repro- ducción. El principal órgano diana
En los casos en que se detecte la presencia de ar- es el SNC, en particular el sistema
sénico en el estómago como una masa radiopaca en extrapiramidal, por lo que el paciente tiene un
la radiografía simple de abdomen, el tratamiento de cuadro similar al de la
elección es la gastrostomía urgente para extraer el enfermedad de Parkinson.
tóxico potencialmente mortal. En algunos casos se La neurotoxicidad se presenta en 3 períodos:
ha realizado la colonoscopia para extraer residuos prodrómico, clínico y de estado. El prodrómico
del colon. se manifiesta en forma de anorexia, astenia,
El resto del tratamiento será sintomático, ya que somnolencia, insomnio, mialgias, cefalea y al-
la depuración renal y extrarrenal son ineficaces. En teraciones sexuales; la fase o período clínico
caso de arritmias cardíacas, no debe administrarse evoluciona con manifestaciones extrapiramida-
quinidina o procainamida, pues el arsénico prolon- les (disastria, incoordinación motora, temblo-
ga el intervalo QT. res, reflejos osteotendinosos exagerados, facies
inexpresiva); el período de estado se caracteri-
za por alteraciones psicomotoras asociadas a
MANGANESO un cuadro extrapiramidal grave y cuadros agu-
dos psiquiátricos (psicosis maniacodepresiva).
Los más expuestos a este tipo de intoxicación son Paralelamente se observan alteraciones respira-
los que trabajan en la extracción del mineral o en la torias en forma de bronquitis aguda y crónica,
industria metalúrgica (aleaciones con otros metales, neumonías y cuadros obstructivos
bronquiales. Se señalan abortos espontáneos,
pérdida de la libido e impotencia.
571
Las concentraciones de manganeso en la sangre hay afección del SNC consistente en cambios del
normalmente oscilan entre 0,7 y 1,5 g/dl; en la ori- carácter y de la personalidad (eretismo mercurial);
na los valores normales se encuentran en 1 g/g de el paciente presenta una gran timidez, insomnio,
creatinina. irritabilidad, pérdida de la memoria, alucinaciones
y estados maniacodepresivos. Aparecen también
Tratamiento temblor intencional (temblor mercurial), una poli-
En las fases iniciales resulta efectiva la administra- neuropatía sensitivomotora que afecta
ción de EDTA Ca, en una dosis similar a la que se fundamental- mente las extremidades inferiores, así
usa en la intoxicación por plomo. El resto del trata- como cuadros de insuficiencia renal crónica; se han
reportado, ade- más, síndromes nefróticos.
miento es sintomático.
La ingestión de mercurio metálico o elemental,
frecuente en niños, no es peligrosa en pequeñas
can- tidades (termómetros), pues casi no se
MERCURIO absorbe, pero si la ingestión es masiva, sí
aumentan los valores plasmáticos, lo que puede
El mercurio se ha utilizado durante años en diferen- producir un cuadro de toxi- cidad sistémica.
tes labores. Se empleó en medicina en el tratamien-
to de enfermedades infecciosas o como antiséptico. Tratamiento
En la actualidad se usa en la elaboración de pestici- La ingestión de compuestos inorgánicos de mercu-
das, de lámparas, luces de neón, baterías, pintura, rio es potencialmente cáustica y requiere tratamien-
odontología, en la minería (cinabrio), electrólisis, to con protección gástrica; en la intoxicación grave
acumuladores eléctricos, instrumentos de precisión, se procederá a la descontaminación digestiva me-
laboratorios, productos farmacéuticos, explosivos, diante el vaciado gástrico si no existe riesgo de per-
tenerías, espumas de poliuretano y en trabajos de foración; se iniciará de forma simultánea el
joyería. Sus efectos biológicos y toxicidad depen- tratamiento quelante y se valorará la indicación de
den de la forma en que se introduzca en el cuerpo. una esofagogastroscopia para considerar las secue-
Existen tres formas de mercurio: mercurio elemental las ocurridas.
o metálico, mercurio inorgánico y mercurio orgáni- El quelante de elección para la intoxicación agu-
co, cada una con perfiles toxicológicos diferentes. da es el BAL o dimercaprol; la dosis inicial es
Las principales vías de absorción son la respira- de 4 mg/kg/IM cada 4 h durante 48 h, cada 6 h el
toria, digestiva, cutánea y transplacentaria; los va- tercer día y cada 12 h durante un día más. La D-
pores de mercurio atraviesan con facilidad las penicilamina es la droga de elección en las
membranas celulares y alcanzan con rapidez el intoxica- ciones crónicas por mercurio inorgánico,
torrente circulatorio. El mercurio metálico práctica- a la dosis de 25 mg cada 6 h por vía oral, durante 5
mente no es absorbido. a 10 días. La ingestión de mercurio elemental en
pequeñas cantidades, como las de los termómetros,
Cuadro clínico no requie- re tratamiento específico, pero si es
Las manifestaciones clínicas serán diferentes si se masiva necesi- tará de descontaminación gástrica,
trata de una intoxicación aguda o de una crónica. La lavado intestinal o aspiración mediante endoscopia
ingestión de una sal de mercurio por lo general causa en caso de estar
gastroenteritis, estomatitis, colitis ulcerohemorrági- localizado el mercurio en el tubo digestivo.
ca, insuficiencia renal aguda y en casos graves, shock
refractario y muerte; en ocasiones se encuentran al-
teraciones cutáneas como rash morbiliforme, y la
inhalación de altas concentraciones es capaz de pro-
TALIO
ducir lesión endotelial con edema agudo del pulmón.
La exposición crónica causa gingivitis, estomati- tis El talio es un metal antiguamente utilizado como
con sialorrea marcada, a veces una pigmentación de rodenticida y hoy prohibido con esta finalidad, aun-
las encías (rodete mercurial) y con frecuencia se que sí se emplea en la industria (células fotoeléctri-
pierden las piezas dentarias. En los casos severos cas, joyería, lentes de ópticas y en laboratorios
químicos). La dosis letal oscila entre 12 y 15
mg/kg,
572
aunque se han descrito muertes con 200 mg por vía tensores y vasodilatadores (nitroprusiato sódico, ni-
oral. troglicerina); anilinas, fenacetina (empleados como
El talio iónico penetra en el organismo y en las analgésico); benzocaína y prilocaína (usados como
células gracias a que su estructura electrónica es muy anestésicos locales); cloratos, bromatos, yodatos
similar a la del potasio. Tiene una particular afini- (utilizados como pesticidas); sulfonas, como la
dad por el SNC, por lo que produce alteraciones fun- primaquina y cloroquina (antipalúdicos); perman-
cionales mitocondriales. ganato de potasio (antiséptico); nitrobenceno
(disol- vente); metoclopramida, nitrito de amilo.
Manifestaciones clínicas La vía de intoxicación es la oral, pero también
La ingestión aguda causa un cuadro gastroenterocó- penetran por la piel y mucosas (anilinas utilizadas
lico muy severo, al que 3 o 4 días después sigue una como colorantes y tinte de vestidos y calzados); por
polineuropatía de predominio sensitivo, que afecta lo general son intoxicaciones accidentales (al con-
sobre todo a las extremidades inferiores, ascendente fundir la sal común con nitratos), en fabricantes de
y en potencia muy grave. Al cabo de 8 a 10 días jamón y embutidos; por sobredosificación (empleo
suele aparecer una alopecia, que es patognomónica de anestésicos locales en lactantes); preparación de
de esta grave intoxicación. biberones con agua de pozo o confección de
Los casos severos presentan una encefalopatía papillas o fórmulas basales.
metabólica y coma. En resumen, es una intoxica-
ción potencialmente mortal que a veces deja secue- Fisiopatología
las neurológicas. La metahemoglobinemia adquirida tiene lugar cuan-
El talio es radiopaco, por lo que se puede visuali- do la tasa de formación de la metahemoglobina ex-
zar en una radiografía simple de abdomen cuando cede la tasa de reducción, tras una exposición a
es ingerido. diversos agentes oxidantes. La metahemoglobina es
una hemoglobina anómala, en la que la molécula de
Tratamiento hierro del grupo hem se halla en estado férrico
Hay que hacer un lavado gástrico abundante y a (Fe+++), a diferencia de lo que ocurre en la he-
continuación administrar azul de Prusia oral: 1 g moglobina normal, en la que el hierro se encuentra
cada 4 h; si no se dispone de éste, se utiliza el car- en forma divalente o ferrosa (Fe++).
bón activado oral (30 g cada 4 h y posteriormente Los agentes tóxicos metahemoglobinizantes se
catárticos) (ver tratamiento general de las intoxica- dividen en directos e indirectos; los de acción indi-
ciones). Esta conducta se mantiene durante 48 h. recta sólo ejercen su acción in vivo, ya que no son
El talio no se metaboliza y sólo se excreta por vía metahemoglobinizantes por sí mismos y necesitan
renal, por lo que se debe realizar una diuresis forza- ser transformados previamente por el metabolismo
da neutra con abundante aporte de cloruro de potasio hístico. Los más representativos de este grupo son
si la función renal y los valores de K sérico lo per- los aminoderivados (anilina, fenacetina) y nitrode-
miten; este tratamiento se mantiene por 5 o 6 días. rivados (nitrobenceno); todos ellos son también
Si la concentración de talio en la sangre es ma- agentes hemolizantes, pues destruyen el hematíe.
yor de 500 g/L, se debe realizar una hemodiálisis. En cambio, los metahemoglobinizantes directos
(nitritos y nitratos, bromatos, cloratos, etc.) son
oxidantes tanto in vivo como in vitro.
SUSTANCIAS METAHE- El aumento de la tasa de metahemoglobina en la
sangre produce dos tipos de síntomas: cianosis y
MOGLOBINIZANTES sín- tomas dependientes de la hipoxia hística. La
ciano- sis por metahemoglobina aparece a partir
de 1,5 a 2 g/100 ml de metahemoglobina formada;
La metahemoglobina es una forma oxidada de la la me- tahemoglobina desplaza hacia la izquierda
hemoglobina. Entre los principales tóxicos metahe- la curva de disociación de la oxihemoglobina, por
moglobinizantes se encuentran los nitritos y nitra- lo que la hemoglobina que se mantiene
tos, cuya fuente de intoxicación son el agua de pozo funcionante se com- bina con el oxígeno a su paso
contaminada, fertilizantes y medicamentos hipo- por los pulmones, pero
573
lo cede mal a los tejidos; de ahí que no sea útil para
el transporte de oxígeno.
ANILINA
Cuadro clínico
Y NITROBENCENO
La cianosis de la piel y mucosas, que adquieren una La anilina es la fenilamina o aminobenceno, que se
tonalidad descrita como “azul pizarroso”, es el prin- obtiene mediante la acción de la mezcla de ácido
cipal síntoma de metahemoglobinemia. Se localiza sulfúrico y ácido nítrico sobre el benceno. Al incor-
en los pómulos, pabellones auriculares, alas de la porarse el ion nitronio se produce nitrobenceno, el
nariz, uñas, palmas de las manos, plantas de los pies, cual se reduce y se transforma en anilina (pertenece
labios, conjuntivas y velo del paladar, y mejora cuan- al grupo de los aminoderivados de los hidrocarbu-
do se administran altas concentraciones de oxígeno. ros aromáticos). Es un líquido oleoso, con un olor
La PCO2 en la sangre arterial está dentro de límites característico, incoloro, que se ennegrece en
normales, lo que ayuda a hacer el diagnóstico de presen- cia del aire. Es bastante soluble en agua,
esta intoxicación. La orina, así como la sangre arte- pero toda- vía lo es más en alcohol, éter y grasas.
rial, adquieren un color oscuro achocolatado, debi- Tiene una marcada volatilidad, por lo que las
do a la presencia de la metahemoglobina.
principales vías de intoxicación son la oral (en el
Existen signos a causa de la hipoxia, cuya inten- caso de las intoxi- caciones voluntarias),
sidad dependerá de la tasa de metahemoglobina, ta- inhalatoria (por exposición en el medio laboral) y
les como cefalea, disnea, visión borrosa, pulso de manera fundamental a tra- vés de la piel (tras el
filiforme, taquicardia, náuseas, vómitos y en casos contacto con las superficies cutaneomucosas en
graves, convulsiones y coma. Con tasas de metahe- relación con tintes de ropa y calzado).
moglobina superior al 70 % la evolución es fatal. Estas sustancias encuentran amplia utilización en
la fabricación de colorantes, tintas para pieles,
Tratamiento telas, explosivos, así como también en las industrias
jabo- nera, fotográfica, farmaceútica, de artes
Consiste en la administración de oxígeno y elimina-
gráficas, etc. Por tal motivo, la intoxicación por
ción del tóxico en caso de que su entrada haya sido
anilina, nitroben- ceno y sus derivados, constituye
por la piel o mucosas; si la vía de exposición es oral, una causa frecuen- te de intoxicación, sobre todo en
tienen utilidad el carbón activado y el lavado gás-
el ámbito industrial. Patogenia
trico.
La droga de elección es el azul de metileno al 1 % La anilina produce metahemoglobinemia. La
y se utiliza cuando existen valores de metahemoglo- hemo- globina y la metahemoglobina en
condiciones nor- males, se encuentran en equilibrio
bina superiores al 30 %. Se administra por vía EV
en el organismo. Cuando la hemoglobina pasa a
en dosis de 1 a 2 mg/kg (0,1 a 0,2 ml/kg) en 10 min,
metahemoglobina es oxidada y pierde un electrón,
que se repite si no hay respuesta hasta un máximo con lo que el hierro en estado ferroso de la
de 7 mg/kg, ya que el propio azul de metileno en hemoglobina gana una valencia y pasa a ión
dosis superiores puede ser metahemoglobinizante. férrico, trivalente, que constituye la me-
En los casos de coma o hemólisis asociados, o tahemoglobina, que es incapaz de transportar oxí-
cuando no hay respuesta al azul de metileno, se uti- geno. Por lo general, un 3 % de la hemoglobina es
lizan técnicas depurativas, tales como la exanguino- transformada en metahemoglobina diariamente.
transfusión o la plasmaféresis; mediante ellas se Existen en el organismo mecanismos reductores ta-
elimina el tóxico, la metahemoglobina y los produc- les como la glutatión peroxidasa, los sulfhidrilos y
tos de la hemólisis, lo que evita que ocurra fallo re- el ácido ascórbico, que convierten la metahemoglo-
nal. Se repone entonces la hemoglobina funcionante bina en hemoglobina. La anilina es un metahe-
moglobinizante indirecto por lo que también
para un adecuado transporte de oxígeno.
produce hemólisis; aparecen anemia, ictericia,
hipercaliemia y hemoglobinuria, con riesgo de
insuficiencia renal aguda.
574
Acción metahemoglobinizante nas. En los casos más graves los síntomas neuroló-
La anilina, el nitrobenceno y sus derivados son tóxi- gicos son los predominantes.
cos metahemoglobinizantes, cuya acción consiste en Síntomas neurológicos: Se caracterizan por la
interferir con el transporte de oxígeno de la hemo- presencia de excitación, estupor, convulsiones y
globina mediante oxidación de las moléculas de hierro coma, de posible desenlace fetal.
del estado ferroso a una forma férrica (metahe-
moglobina), que no se disocia y, por lo tanto, carece Intoxicación crónica
de capacidad transportadora de oxígeno; se produce Se produce palidez y subictericia por anemia hemo-
así hipoxia hística. lítica. Es característica la presencia de corpúsculos
En condiciones normales la metahemoglobina de Heinz intraeritrocitarios, que aparecen como
constituye una ínfima fracción del total de la hemo- pequeñas esferas situadas excéntricamente en la
globina circulante, gracias al efecto de la enzima peri- feria del citoplasma de los hematíes. Estos
reductasa de metahemoglobina. Cuando a causa de corpúscu- los se observan también en la
la intoxicación por estas sustancias se produce me- intoxicación aguda. Pueden verse alteraciones de la
tahemoglobinemia que afecta a más del 30 % de la forma de los he- matíes, como policromatofilia,
hemoglobina, se presentan síntomas importantes. punteado basófilo,
Una cifra de metahemoglobina superior al 75 % pro- anisocitosis y poiquilocitosis.
voca la muerte. La cianosis en la intoxicación crónica es discreta
y los síntomas nerviosos consisten en irritabilidad y
Acción directa y alérgica sobre la piel cambios de carácter.
La primera causa irritación sobre la piel y la segun- La hematuria y el cáncer de la vejiga han sido
da una dermatitis alérgica por contacto, que depen- relacionados con la manipulación crónica de deri-
de de la sensibilidad individual de cada sujeto. vados de la anilina. Este tipo de cáncer de la vejiga
(“cáncer anilínico”) se presenta en grupos de indi-
Acción cancerígena viduos de edades menores que en el cáncer vesical
La anilina y algunos de sus derivados se han asocia- de la población masculina general. Así, se ha ob-
do al aumento de la probabilidad de padecer tumo- servado en sujetos menores de 50 años y aun más
res de la vejiga urinaria, en obreros que utilizaban jóvenes.
profesionalmente colorantes a base de estos pro-
ductos. Diagnóstico
El diagnóstico se establece sobre la base del cuadro
Cuadro clínico clínico y el antecedente de contacto con el tóxico,
Varía según la intoxicación sea aguda o crónica. y se confirma mediantela dentificación de:
1. La metahemoglobinemia utilizando técnicas
Intoxicación aguda espectrofotométricas.
Cianosis. Es el síntoma más significativo y depende 2. Los corpúsculos de Heinz, que aparecen desde
del grado que alcance la metahemoglobinemia. Si las 24 h de producida la intoxicación y alcan-
ésta es intensa, habrá una cianosis pizarrosa en la zan su máximo a los 3 días.
piel y mucosas. En situaciones menos intensas la 3. La anemia hemolítica.
cianosis será discreta y sólo visible en ciertas zonas. 4. Derivados anilínicos en la orina.
Se recomienda que en todo paciente con cianosis no
explicable se sospeche la presencia de metahe- Tratamiento
moglobinemia por intoxicación con anilina o nitro- Todos los intoxicados recibirán oxígeno al 100 % y
benceno. se les debe administrar carbón activado si la intoxi-
Síntomas causados por la hipoxia. La incapaci- cación es por vía oral. El paciente debe ser
dad de la sangre para transportar oxígeno produce despoja- do de toda su ropa para evitar que se
disnea, taquicardia, cefalea, vértigos, zumbidos de prolongue la absorción del tóxico (tintes de calzado
oído, náuseas, fatiga y adormecimiento de las pier- o vestidos) a través de la piel y se lavará la
superficie cutaneomu- cosa expuesta con grandes
cantidades de agua.
575
El antídoto de elección para la metahemoglobi- • Mezcla de combustibles.
nemia tóxica (sólo si la metahemoglobinemia es su- • Fabricación de pigmentos para pinturas.
perior al 30 %) es el azul de metileno al 1 %. Se • Fabricación de plásticos (estearato de plomo).
administra por vía EV en la dosis de 1 a 2 mg/kg • Desguace de buques.
(0,1 - 0,2 ml/kg) para pasar en 5 min. Dicha dosis se
puede repetir al cabo de 1 h si no existe respuesta, Ambiente general
hasta alcanzar un máximo de 7 mg/kg, ya que el El mecanismo primario a través del cual se produce
pro- pio azul de metileno en altas dosis es, como la extensa y variada contaminación, lo constituye la
ya se expuso, metahemoglobinizante. emisión hacia el aire del metal o sus compuestos,
Cuando exista hemólisis, o en aquellos casos en por medio de lo cual se logra una alta capacidad
que el paciente se encuentre en coma o no haya res- contaminante de prácticamente todos los componen-
puesta al azul de metileno, se utilizará la exangui- tes ambientales. Las principales fuentes son la
notransfusión o la plasmaféresis. El resto del com- bustión de gasolina, con un aporte muy
tratamiento será de soporte y sintomático. alto, y la fundición primaria del plomo; el cocinar
o almace- nar alimentos en cerámicas vidriadas, la
ingestión de bebidas alcohólicas destiladas en
PLOMO serpentines de plomo o vinos tratados con sales
de plomo como preservativo, y el fenómeno de la
“pica” (niños que chupan juguetes o ingieren
El Departamento de Salud y Servicios de los EE.UU.
pintura rascada de las paredes).
ha reconocido la intoxicación por plomo como un
problema ambiental de máxima importancia, pues Absorción
afecta con frecuencia a los niños. Niveles de plomo
El plomo se absorbe por las vías respiratoria, gas-
en sangre superiores a 10 g/dl pueden deteriorar
trointestinal y piel; la vía de ingreso, el tamaño de
las funciones cognoscitivas y llevar a trastornos en
la partícula y el tipo de compuesto de plomo
la conducta de los niños y a un desarrollo intelectual
(orgánico o inorgánico), determinan la
deficiente; de ahí la gran importancia de la preven- concentración y la po- sibilidad de difusión de éste
ción de esta intoxicación. hacia el organismo; cerca del 35 a 50 % del plomo
El plomo se encuentra en forma natural en la cor- que alcanza el tracto respi- ratorio inferior es
teza terrestre de un modo relativamente abundante absorbido y pasa al torrente san- guíneo; el plomo
y su uso y contaminación ambiental se han incre- depositado en la nasofaringe, tráquea y
mentado de manera extraordinaria en los últimos 150 bronquios asciende por acción de los cilios para el
años, lo que ha conducido a un aumento de las con- esófago, y se absorbe por el tracto gastroin-
centraciones biológicas de éste en la población, con testinal.
niveles más altos en las zonas urbanas (20 a 25 g/dl Los compuestos orgánicos de plomo son los que
relacionados con las emisiones de vehículos auto- se absorben con mayor intensidad por el tracto gas-
motores y de la industria), mientras que las zonas trointestinal, y a través de la piel sólo los compues-
rurales muestran las concentraciones más bajas (10 a tos inorgánicos del metal. El 90 % del plomo se
14 g/dl). localiza en los huesos, donde llega a tener una vida
Las concentraciones sanguíneas aparecen más ele- media de hasta 30 años; el 10 % restante se sitúa en
vadas en los hombres que en las mujeres y también los riñones, hígado y músculos estriados. En la san-
más altas entre los fumadores en comparación con gre, el 95 % del plomo circulante se encuentra en
los no fumadores. los eritrocitos.
Se elimina por la orina (75 %), por las secrecio-
Fuentes de contaminación nes gastrointestinales (16 %) y por el cabello, uñas
Ambiente ocupacional y sudor.
• Minería y fundición de plomo. Los efectos del plomo con respecto a la anemia,
• Alfarería. se hacen más evidentes en presencia de déficit de
hierro y de calcio en el organismo. A nivel intesti-
• Fabricación y reparación de baterías.
nal el plomo utiliza los mismos mecanismos de
576
absorción del calcio, por lo tanto, las cantidades de ciones relativamente bajas en el ambiente o por
éste en la dieta influyen en la absorción del plomo fuen- tes ambientales atípicas o insospechadas
en el sentido de que dietas ricas en calcio restringen bajo un proceso de exposición mantenido a largo
la absorción intestinal del plomo y viceversa. plazo.
Mecanismo de acción
Manifestaciones generales
El mecanismo tóxico del plomo tiene tres posibili-
Incluyen fatiga, artralgias, temblor, cefalea, astenia
dades:
e impotencia sexual.
1. Compite con los metales esenciales, especial-
Sistema hemolinfopoyético (HLP)
mente el calcio y zinc, en su sitio de inserción
En el sistema HLP se encuentran palidez facial (fa-
a las proteínas.
cies saturnina) y anemia hipocrómica, normocítica
2. Tiene afinidad por los grupos sulfidrilos (-SH)
o microcítica.
de las proteínas, y altera la forma y función de
éstas, entre las cuales se encuentran enzimas.
Sistema nervioso periférico
3. Altera el transporte de iones esenciales. Hay una polineuropatía motora (parálisis
saturnina), cuya manifestación principal y más
Fisiopatología
frecuente es la debilidad de los músculos
Sistema hemolinfopoyético. Uno de los primeros y extensores de las manos; además, hiperestesia
más importantes efectos del plomo en el organismo cutánea, dolores musculares y calambres.
es la alteración de la síntesis del grupo hem, por la
interferencia en algunas de sus etapas enzimáticas. Sistema nervioso central
Sistema nervioso. En los adultos, la manifesta- El paciente presenta trastornos de la personalidad,
ción neurológica más frecuente es la polineuropatía la memoria, el aprendizaje y de la coordinación
periférica, que se debe a una desmielinización y dis- motora; encefalopatía aguda con confusión y con-
minución de la velocidad de conducción motora. vulsiones (rara en adultos), y neuritis óptica.
En los niños es más común la encefalopatía, ya
que el plomo atraviesa con más facilidad la barrera Sistema digestivo
hematoencefálica y altera la función mitocondrial, Hay cólicos, constipación, anorexia, náuseas y vó-
lo que da lugar a la aparición del coma y convul- mitos, sabor metálico en la boca, y alteraciones de
siones. la función hepática; en el examen de las encías se
Riñones. El plomo produce lesiones de los túbulos detecta una línea de color gris-azulado (depósito de
proximales y en el asa de Henle, que se caracteriza sulfuro de plomo) llamado “ribete de Burton”.
por aminoaciduria, hipofosfatemia con hiperfosfa- Exámenes complementarios
turia relativa y glucosuria.
Niveles de plomo en la sangre. Es el mejor indica-
Cuadro clínico dor de exposición reciente y expresa el equilibrio
entre la cantidad del metal absorbido, la que está
Las manifestaciones clínicas son agudas o crónicas
siendo transportada por la sangre y la que se depo-
y en general tienen carácter sistémico. Las intoxica-
sita en los tejidos. Los niveles de plomo encon-
ciones agudas son infrecuentes y se producen en
trados normalmente en la población varían entre 10
ambientes laborales. Las que se presentan en la po-
blación, salvo situaciones de accidentes o contami- y 35 g/dl.
Protoporfirina libre eritrocitaria. Es el mejor in-
naciones masivas en general, suelen ser de carácter
dicador de los depósitos corporales de plomo en los
crónico.
tejidos blandos. Sus resultados deben ser
La intoxicación crónica constituye la situación
interpreta- dos conjuntamente con los niveles de
más frecuente, así como el problema epidemiológi-
plomo en la sangre.
co más importante. Un aspecto que incide en la clí-
nica de las intoxicaciones por plomo corresponde a Actividad de la ácido gamma aminolevulínico
los cuadros subclínicos producidos por concentra- deshidrasa. Es el más sensible indicador de los
efec- tos del plomo con cambios detectables en
niveles tan bajos de plomo en sangre como 10
g/dl.
577
Tratamiento Los efectos tóxicos de la sobredosis de metanol
Hay que separar al paciente de la exposición al plo- se deben a la formación de esos dos metabolitos, ya
mo. El EDTA monocálcico disódico es el quelante que él, por sí mismo, sólo produce depresión del
SNC. Aunque en un principio se señaló que el for-
de elección (25 a 75 mg/kg/ día), EV, durante 5 días,
maldehído era el máximo responsable de la toxici-
precedido de una dosis única de 3 mg/kg de dimer-
dad ocular, estudios posteriores demostraron que
caprol, si el caso es grave.
por su rápida transformación en ácido fórmico no
La D-penicilamina (1 a 2 g/día/vía oral) durante
era posible tal responsabilidad, por lo que el
varias semanas, es una segunda opción, pero está ácido fórmico sería el causante de la toxicidad
contraindicada en los pacientes alérgicos a la peni- ocular y de la acidosis metabólica con brecha
cilina.
aniónica elevada. Cuadro clínico
Se utilizan también derivados del dimercaprol,
como el ácido 2,3 dimercaptosuccínico (DMSA) y El inicio de la sintomatología varía entre 40 min
el 2,3 dimercapto 1- propanosulfonato (DMPS). y 72 h, aunque por lo general los síntomas
aparecen en las primeras 12 a 24 h. Con
anterioridad el pa- ciente sólo muestra un estado
ALCOHOL METÍLICO de embriaguez, si ha bebido simultáneamente
etanol. Los síntomas enton- ces pueden demorarse.
El tóxico afecta sobre todo el SNC, los ojos y el
El alcohol metílico o metanol, también conocido
aparato gastrointestinal.
como “alcohol de madera”, se utiliza industrialmente
en la fabricación de disolventes de pinturas y barni-
ces anticongelantes de automóviles, solventes de 1. Sistema nervioso central. En la intoxicación
laca, líquidos de fotografía o aditivo de la gasolina. leve o moderada se produce cefalea, mareos,
En los hogares se le emplea como fuente de calor letargia, ataxia o simplemente un estado de
(“alcohol de madera”) o se encuentran como parte embriaguez similar al de la intoxicación etílica.
En casos graves son comunes convulsiones,
de productos comerciales. Además, existe un uso
coma y edema cerebral.
fraudulento de éste como sustituto del etanol en
2. Afectación ocular. Se presenta visión borrosa
bebidas alcohólicas fabricadas de manera clandesti-
referida “como caída de copos de nieve”, dis-
na. La vía más habitual de intoxicación aguda es la
minución de la agudeza visual y fotofobia. Al
oral, pero se han descrito casos raros por la vía res-
examen físico las pupilas están dilatadas, hay
piratoria o cutánea. La dosis mínima letal se consi-
pérdida del reflejo fotomotor, edema retiniano
dera que es de 30 ml de metanol puro, aunque otros o hiperemia del disco óptico y, en ocasiones,
autores manejan cifras muy dispares en relación con ceguera irreversible por atrofia el nervio óptico.
la dosis tóxica que produce ceguera o la muerte, pues 3. Aparato gastrointestinal. Por lo irritante del
existe una gran variabilidad individual. De todas producto se producen náuseas, vómitos, epigas-
formas, la mortalidad es muy alta. tralgia o manifestaciones clínicas de una pan-
Fisiopatología creatitis aguda.
El 90 o 95 % del metanol es biotransformado en el 4. Otras manifestaciones. Aparición de disnea
hígado, donde se oxida por la presencia de la enzima que refleja la presencia de acidosis
alcoholdeshidrogenasa, lo que produce formaldehí- metabólica
do, que se convierte rápidamente por la aldehido- (normoclorémica con brecha aniónica elevada).
deshidrogenasa en ácido fórmico. Este último, En la orina se aprecia un olor a formaldehído.
mediante una oxidación dependiente del folato, se
transforma en anhídrido carbónico (CO2) y agua Los exámenes complementarios muestran una aci-
(H2O). Es importante conocer que el etanol tiene una dosis metabólica con brecha aniónica aumentada,
elevada afinidad por la alcoholdeshidrogenasa (10 a acidosis láctica, incremento del hematócrito y del
20 veces superior al metanol); de ahí su gran efi- volumen corpuscular medio, hiperglicemia e hipe-
cacia como antídoto. ramilasemia.
578
Diagnóstico gunos países se cuenta con otro antídoto, el
El diagnóstico de certeza se realiza con la demos- formepizol o 4-metilpirazol (Antizol, Orphan,
tración en el plasma del metanol, técnica que debie- Medical Inv.), el cual sustituye al etanol. Éste
actúa bloqueando la formación de los metaboli-
ra existir en todos los hospitales por lo grave de la
tos (formaldehído y ácido fórmico) responsables
intoxicación y las posibilidades terapéuticas con el
de la toxicidad, debido a su alta afinidad por la
antídoto. Debido al período de latencia y a los esca-
aldehidodeshidrogenasa. Para que este efecto sea
sos síntomas iniciales, fáciles de confundir con un
adecuado deben existir en el plasma valores de
estado de intoxicación etílica, se deberá pensar en
etanol de 1 a 1,5 mg/ml o 100 a 150 mg/100 ml.
intento de suicidio o en accidente, cuando el pacien- El etanol puede administrarse por vía oral,
te presenta acidosis metabólica intensa y rebelde al aun- que la mayoría de los autores aconsejan
tratamiento, con la ocurrencia de un aumento de la la EV por vía central, preferiblemente. Para
brecha aniónica y osmolar. El diagnóstico diferen- ambas vías es necesario diluir el alcohol
cial se realiza con otras intoxicaciones que provo- etílico abso- luto. Si es por la oral, se diluye
quen acidosis metabólica con incremento de la con agua hasta alcanzar una concentración del
brecha aniónica. 20 al 30 %, y en el caso de la EV, se diluye en
En todos los casos en que se sospeche una intoxi- suero glucosado hasta llegar al 5 o10 %. La
cación por metanol, será importante realizar un he- pauta recomendada es la siguiente:
mograma, gasometría arterial, calcular la brecha • Una dosis de ataque de etanol equivalente
osmolar mediante la diferencia entre la osmolaridad a 1 ml de alcohol etílico absoluto (99 a 100 %
sérica medida y la calculada; ionograma, creatinina, de pureza) por kilogramo de peso del
glicemia, amilasa sérica y transaminasas. Igualmente paciente
deben solicitarse los valores en plasma de etanol para (por vía oral o EV); esta última se
descartar la ingestión simultánea de éste, y en el fon- administra en 15 min.
do de ojo se observará la hiperemia del disco óptico. • Se sigue con una dosis de mantenimiento
Se consideran signos de mal pronóstico la inges- equivalente en alcohol etílico absoluto
tión superior a 30 ml de metanol puro u observar a 0,16 ml/kg/h (por vía oral o EV). Dicha
metanol en sangre mayor de 50 mg %, un bicarbo-
dosis debe duplicarse (0,30 a 0,40 ml/kg/h)
nato estándar menor de 18 mmol/L, el aumento del
durante el tiempo que se mantenga la hemo-
volumen corpuscular medio, o la presencia de con-
diálisis, si es que se indica. Esta dosis se
vulsiones, coma, hipotensión o bradicardia.
con- tinuará hasta que las
Tratamiento concentraciones de metanol se encuentren
por debajo de 20 mg/
La intoxicación por metanol se considera como muy
100 ml, y si no se dispone de este resultado,
grave, por lo que inmediatamente debe administrar-
se toman como guía los valores de pH supe-
se su antídoto (etanol) cuando se sospeche una in-
riores a 7,30 sin ayuda de bicarbonato.
gestión del tóxico superior a 30 ml en el adulto o
3. Tratamiento con antídoto. El formepizol es un
de 0,4 ml/kg en niños, exista acidosis metabólica
medicamento con las ventajas de no aumentar
con pH inferior a 7,30 con brecha aniónica aumen-
tada, o manifestaciones clínicas visuales, aunque se la sedación del paciente, de tener menos
desconozcan las concentraciones plasmáticas de riesgo de hipoglicemia, menos problemas de
metanol. Este tratamiento debe realizarse en una UCI hiper- volemia, menos inestabilidad
y se tratarán las alteraciones del medio interno. hemodinámica y de fácil manejo y
administración. Su gran des- ventaja es su
1. Lavado gástrico. Es eficaz en todos los casos elevado precio. El formepizol se presenta en
que acudan antes de la hora posingestión. El bulbos de 1,5 ml (1 g/ml o 1 500 mg/bb). La
carbón activado no lo es ni tampoco los laxan- dosis de ataque es de 15 mg/kg cada 12 h
tes o catárticos. hasta 4 dosis (2 d) y luego 15 mg/kg cada 12 h
2. Tratamiento con etanol. El tratamiento con hasta la normalización del paciente. Siempre
etanol es el antídoto de elección, aunque en al- se administrará diluido en solución salina
para perfundir en 30 min cada dosis.
4. Alcalinización. La administración de bicarbo-
nato no sólo mejora la acidosis metabólica,
sino
579
que además, evita la formación de ácido fór- co, pinturas, tintes, barnices, colas y sustitutos de la
mico, y debe realizarse lo antes posible en de- glicerina o detergentes. Por su sabor ligeramente
pendencia de los valores de bicarbonato dulce, a veces se ha empleado para edulcorar bebi-
estándar y el EB. A veces hay que administrar das alcohólicas. La dosis letal mínima es de 100 ml
grandes cantidades por los valores tan bajos en adultos. La mayoría de las intoxicaciones por
de pH. este alcohol se producen por vía oral y son muy
5. Hemodiálisis. Dentro de las medidas de depu- graves. El etilenglicol per se apenas es tóxico,
ración extrarrenal es la más útil, ya que es ca- pero su biotrasformación por la
paz de depurar tanto el metanol como sus alcoholdeshidrogenasa y otras enzimas, origina
metabolitos. Ni la diuresis forzada ni la diálisis metabolitos que son muy tóxi- cos (glicoaldehído,
peritoneal tienen efecto depurador para esta ácido glicocólico, ácido glicoxí- lico, formato y
intoxicación. Se aconseja su empleo ante cual- oxalato). Estos productos causan acidosis
quiera de las situaciones siguientes: metabólica, depresión miocárdica, depre- sión del
a) Concentraciones de metanol superiores a 50 SNC, alteraciones renales e hipocalcemia.
mg/100 ml. Clásicamente, las manifestaciones clínicas se divi-
b) Acidosis metabólica refractaria al tratamien- den en función del tiempo transcurrido. Se sospe-
chará cuando se trate de un paciente con
to médico (pH < 7,25).
embriaguez similar a la del etanol (pero sin aliento
c) Manifestaciones visuales.
característi- co), coma asociado a acidosis
d) Depresión del nivel de conciencia. metabólica con au- mento de la brecha aniónica y
e) Insuficiencia renal aguda. presencia en la orina de cristaluria (oxalato cálcico
La hemodiálisis se continuará hasta lograr o ácido hipúrico).
valores de metanol en la sangre inferiores
a 20 mg/100 ml o el pH se mantenga por Manifestaciones clínicas
encima de 7,30 sin ayuda de bicarbonato. En Estadio 1 (30 min a 12 h pos ingestión). Alteracio-
caso de no disponer de gasometría, se segui- nes gastrointestinales y del SNC. Aspecto similar a
rá durante 10 a 12 h. Recordar que durante la intoxicación etílica aguda (ausencia de olor a al-
la hemodiálisis hay que continuar adminis- cohol etílico en la respiración), náuseas, vómitos,
trando etanol. hematemesis, coma y convulsiones, nistagmo, of-
6. Otras medidas. Se evitará siempre el edema talmoplejía, papiledema, atrofia óptica, reflejos dis-
cerebral tratando de no sobrehidratar al paciente minuidos, mioclonias y contracciones tetánicas.
y elevando la cabeza a 350 sobre el plano de la Estadio 2 (12 a 24 h pos ingestión). Alteraciones
cama. Hay autores que aconsejan la adminis- cardiorrespiratorias, polipnea, taquicardia,
tración de folinato cálcico (50 mg EV cada 6 h, hiperten- sión arterial ligera, edema pulmonar
disuelto en dextrosa durante varios días) para agudo e insufi-
prevenir las lesiones visuales.
ciencia cardíaca congestiva.
Estadio 3 (24 a 72 h pos ingestión). Alteraciones
renales, dolores en los flancos, necrosis tubular
ETILENGLICOL aguda.
Y OTROS GLICOLES Tratamiento
Es similar al que se utiliza con el metanol. Sus pila-
La intoxicación aguda por etilenglicol es muy simi- res son la alcalinización del plasma, la administra-
lar a la producida por el metanol, por lo que sólo se ción de etanol y la hemodiálisis. No debe olvidarse
comentarán algunos detalles en que difieren. en este caso la realización del lavado gástrico y las
El etilenglicol (CH2OH2) es otro tipo de alcohol demás medidas de soporte de cualquier
ampliamente utilizado como componente del líqui- intoxicación. Algunos autores recomiendan el uso
do anticongelante de los radiadores de automóviles de piridoxi- na, 50 mg IM cada 6 h por 2 días, y
en países fríos, disolvente en la industria del plásti- tiamina, 100 mg IM cada 6 h, así como de
magnesio en el caso de que exista
hipomagnesemia.
580
60
SÍNDROME
DE AHOGAMIENTO INCOMPLETO
El ahogamiento se define como el fallecimiento por respiración de carácter neurógenico y que está me-
asfixia secundaria a inmersión. El término síndro- diada por los nervios trigémino (agua fría en la
me de ahogamiento incompleto se aplica al sujeto cara) y laríngeo (agua fría en la glotis). A esto se
que sobrevive a dicho evento, al menos 24 horas. añade una bradicardia y una vasoconstricción
Epidemiología periférica con hipertensión arterial. Se conoce
también con el tér- mino de hidrocución. En
En el mundo ocurren aproximadamente 140 000 general es evidente a tem- peraturas por debajo de
casos de ahogamiento en un año, ya que es un acci- 20°C.
dente que sucede a diario. La verdadera incidencia
Con la inmersión ocurre en general una inhibi-
del ahogamiento incompleto todavía no se ha preci-
ción voluntaria de la respiración, hasta alcanzar ni-
sado, pero se supone que es de 2 a 10 veces mayor
veles de PaO2 menores de 70 mmHg y una PaCO2
que el número real de ahogados que se notifica.
mayor de 55 mmHg, momento en que se produce
Para algunos autores, el ahogamiento constituye
un estímulo imperativo del centro respiratorio y
una de las tres primeras causas de muerte entre las
una inspiración involuntaria, que provoca la
edades de 1 a 14 años. En la población general
entrada de agua en los pulmones, lo que origina
un 50 % de ellos ocurre entre los 8 y 20 años. Los
distintas alte- raciones en éstos, así como de los
factores etiológicos incluyen el exceso de confianza
electrólitos en la sangre. Éste se denomina
en la propia capacidad natatoria, los traumatismos, “ahogamiento húmedo” y es más frecuente en los
la ingestión de alcohol, la administración de fárma- adultos.
cos y la posibilidad de epilepsia. Los hombres tie- En otras oportunidades, al agotarse la apnea vo-
nen un mayor índice de ahogamiento que las mujeres. luntaria y el reflejo de zambullida, tiene lugar un
En Cuba, según otros autores, el 64 % de los ca- sos espasmo de la glotis que hace que casi no penetre
tienen lugar en los meses de verano y alcanza el agua en los campos pulmonares. El daño es propia-
pico máximo en el mes de julio. mente por hipoxia. Este “ahogamiento seco” se ob-
El suicidio por este medio predomina en el sexo serva en 10 a 20 % de los casos, y es más frecuente
femenino. en niños.
La hipoxia y la vasoconstricción mantenidas ge-
Fisiopatología neran acidosis metabólica, al mismo tiempo que se
En las últimas cinco décadas se ha hecho mucho produce daño miocárdico con arritmias e hipoten-
énfasis en los cambios fisiopatológicos que ocurren sión arterial, lo que ocasiona una disminución de la
en el ahogamiento incompleto, y los conceptos han perfusión cerebral y coronaria; se establece así el
variado con el paso del tiempo. fallo miocárdico, la lesión neuronal y, finalmente,
El problema esencial es la hipoxia, que condicio- la muerte cerebral.
na la lesión de los distintos órganos de la economía. Lesión pulmonar. La fisiopatología del daño pul-
La secuencia de los hechos se puede resumir de la monar varía según el ahogamiento sea en agua dul-
manera siguiente: ce o salada.
En la inmersión en agua fría se produce el “refle- El agua salada del mar tiene una concentración
jo de zambullida”, que causa una inhibición de la de NaCl de 2,6 %, que es muy elevada si se compa-
ra con la solución salina fisiológica al 0,9 %. Al pe-
netrar en las vías aéreas bajas alcanza el alvéolo,
donde provoca una hipertonicidad que desnaturaliza

581
el surfactante y genera la entrada por ósmosis de planta de los pies; aparece una espuma blanca o
líquido plasmático en los alvéolos. Ambas causas san- guinolenta en las vías aéreas superiores y los
producen edema pulmonar con alteración de la rela- pul- mones, que al corte rezuman un líquido
ción ventilación/perfusión, cuya consecuencia final espumoso; éstos se presentan pesados y
es la hipoxia. edematosos. En el sis- tema cardiovascular se
El agua dulce intralveolar, incluso en pequeñas aprecia dilatación de las ca- vidades derechas.
cantidades (alrededor de 1 o 2 ml/kg) lesiona los
neumocitos tipo II y causa un “lavado por arrastre”, Aspectos microscópicos
así como desnaturalización del surfactante. Esto pro- En los cortes del pulmón se observa edema, hemorra-
voca la aparición de atelectasia, genera la alteración gia intralveolar y ruptura de alvéolos.
en la relación ventilación/perfusión y, en consecuen- Manifestaciones clínicas
cia, aparece la hipoxia. Se produce, además, un au-
Si la inmersión ha sido breve, el paciente está cons-
mento en la resistencia de la vía aérea, lo cual causa
ciente. Si ha deglutido y aspirado agua, tose; tam-
vasoconstricción pulmonar y provoca el desarrollo
bién presenta vómitos, pero en general el estado
de hipertensión pulmonar secundaria. En ocasiones
neurológico es bueno.
se desencadena un síndrome de distress respiratorio
Otra situación ocurre cuando es encontrado flo-
agudo entre las 48 a 72 h posteriores al accidente, el
tando en paro cardiorrespiratorio con un daño neu-
cual se denomina “ahogamiento secundario” y es
rológico probable. Es este el caso que precisa de
más frecuente en adultos.
una valoración general inmediata para establecer
Lesión cerebral. Es secundaria a la isquemia e
facto- res pronósticos que orienten sobre la
hipoxia; es el cerebro el órgano más afectado por
intensidad de la terapéutica que se debe desarrollar
estas noxas. Ocurre en distintas fases:
y la evolución neurológica que va a tener.
Fase vasogénica. Inicialmente se produce un
daño cerebral reversible secundario a la hipoxe- La utilización de la escala de Glasgow del coma
(ver “Traumatismos craneoencefálicos y raquime-
mia, hipotermia, etc., con disminución del me-
dulares”), permite diferenciar a los pacientes con
tabolismo celular. La hipoxia por distintos
riesgo importante de secuelas severas si arroja me-
mecanismos conduce al edema cerebral, que
nos de 6 puntos, aunque esta tiene valor si se
en parte condiciona una menor vascularización
realiza en el primer centro hospitalario tras el
e isquemia cerebral.
rescate, y no al ingreso en la UCI.
Fase de edema cerebral mixto. Es de causa
El examen físico revela cianosis, trismo, apnea,
citotóxica y vasogénica, y evoluciona hacia un
taquipnea y sibilancias. La presencia de espuma ro-
daño cerebral irreversible.
sada en la boca y la nariz indica edema pulmonar.
Las manifestaciones cardiovasculares incluyen ta-
Otras alteraciones orgánicas. Se encuentran al-
quicardia, arritmias generalmente transitorias, hipo-
buminuria, hemoglobinuria y daño renal que en al-
tensión, paro cardíaco y shock circulatorio. Puede
gunos casos progresa hacia la necrosis tubular aguda.
aparecer también en estos pacientes una insuficien-
El paso de agua hipotónica a través del tubo di- cia renal aguda (IRA).
gestivo condiciona su paso por ósmosis a la sangre,
lo que provoca hemodilución, hiponatremia e hipo- Exámenes complementarios
tonicidad, y esto, a su vez, hemólisis. Además de
hemodilución, el agua produce, por traslocación bac- En el hemograma hay leucocitosis en la mayoría de
los casos, mientras que en el examen de orina sue-
teriana, una sepsis. Otras veces causa necrosis he-
len apreciarse proteinuria y hemoglobinuria. En la
pática por isquemia. hemogasometría arterial, el pH está disminuido a
Anatomía patológica causa de la acidosis metabólica presente. La PaO2
Aspectos macroscópicos está también disminuida, mientras que la PaCO2 se
Desde el punto de vista macroscópico, en el hábito
encuentra aumentada o disminuida.
externo del paciente se observa la piel pálida y ru-
La radiografía pulmonar simple revela en
gosa, principalmente en la palma de las manos y
ocasio- nes la presencia de edema pulmonar o de
neumonitis.
582
Tratamiento La consecuencia más importante de una inmer-
Tratamiento preventivo sión prolongada sin ventilación es la hipoxemia, y
la duración de la hipoxia es el factor crítico, ya que
La decisión de reanimar un paciente producto de un
el pronóstico está en relación con el daño hipóxico
accidente por inmersión es ética más que médica y
y la lesión cerebral secundaria. En este sentido, el
seguirán siendo primordiales las medidas preventi- manejo inicial está encaminado a minimizar la hi-
vas para reducir la morbimortalidad derivada de los poxia. Es por eso que los rescatadores tienen que
accidentes por esta causa. restablecer la respiración y la perfusión tan rápido
• No deben ingerirse comidas copiosas, ni líqui- como sea posible. Siempre deben estar preparados
dos abundantes antes de entrar a la playa o pis- para, con precaución y cuidado, minimizar los daños.
cina. El tratamiento inicial a la persona con ahogamien-
• Los niños y adolescentes deben tener la super- to incompleto es restablecer la respiración con la
visión cercana de los familiares y salvavidas. técnica boca-boca, tan pronto como las vías aéreas
• Los adultos que no saben nadar deben mante- estén libres y abiertas y la seguridad del rescatador
nerse en la zona de no peligro, y de estar en esté garantizada. Esto usualmente se alcanza cuan-
botes u otras embarcaciones, utilizar equipos do la víctima está en aguas poco profundas o fuera
salvavidas. de ella.
• Resulta fundamental la no ingestión excesiva Con el traumatismo del cuello hay que ser suspi-
de bebidas alcohólicas que entorpezcan el ra- caz, por lo que éste se mantendrá en posición neu-
zonamiento y minimicen la valoración del tral, sin flexión ni extensión, con el paciente en
peligro. posición horizontal y en decúbito supino. Si la
• Los pacientes con padecimientos tales como la vícti- ma está volteada, hay que alinear la cabeza,
epilepsia deben ser vigilados de forma constante. cuello, tórax y el resto del cuerpo.
• Los niños mayores de 12 años y los adultos de- La respiración debe iniciarse de inmediato cuan-
ben poseer conocimiento de los elementos bá- do la persona no respira. No es necesario limpiar la
sicos de la reanimación, para suministrarla vía aérea del agua aspirada, ya que en la mayoría
precozmente a las víctimas de ahogamiento. de los casos la cantidad de agua en ésta, tanto
• Deben ofrecerse cursos de entrenamiento e in- dulce como salada, es modesta y rápidamente pasa
formación a toda la población, sobre el rescate de los pulmones a la circulación. Por otra parte, de 10
y la reanimación a personas que sufran acci- a 12 % de las víctimas no aspiran agua debido a las
dentes por inmersión, para que tengan al menos razones antes mencionadas. El intento de impedir
un conocimiento mínimo de qué hacer ante un que no pase el agua a los pulmones por medio de
evento de este tipo. la aspiración de las vías aéreas es innecesario y
peligroso, porque puede producir broncoaspiración
Tratamiento prehospitalario del contenido gás- trico.
El ahogamiento y el rescate tras el accidente, pro- La compresión abdominal subdiafragmática
ducen una situación de confusión inicial, en la que (ma- niobra de Heimlich), habitualmente retarda el
es difícil precisar el tiempo de inmersión, la asocia- inicio de la ventilación y de la respiración, por lo
ción o no de traumatismos o de convulsiones, la tem- que sólo se utiliza si se sospecha que hay
peratura del agua, e incluso, las condiciones en las obstrucción de la vía aérea. Si es necesario
que es rescatado (paro cardíaco, presencia o no de realizarla, la reanimación cardiopulmocerebral
movimientos respiratorios). De todas formas, la re- (RCP) se reiniciará después de ésta, con la cabeza
animación in situ ha demostrado su eficacia, aun- ladeada siempre que no se tenga sospecha de
que no sea realizada por expertos. traumatismo cervical.
El objetivo primario de la terapia de urgencia a Las compresiones torácicas no deben hacerse en
las víctimas de ahogamiento incompleto, es la res- el agua, a menos que el equipo de rescate esté
tauración de la ventilación y de la perfusión, así como entre- nado y tenga un soporte para la espalda de la
la normalización de los gases en la sangre y del equi- vícti- ma. No hay buena perfusión cerebral salvo
librio acidobásico. que el
583
accidentado esté en posición horizontal, pues la 2. Reducción de la masa sanguínea cerebral por
vertical reduce el volumen sanguíneo que se dirige vasoconstricción inducida por hiperventilación.
al cerebro y al corazón. El pulso es difícil de consta- Se deben mantener niveles de PaCO2 entre 25
tar por la vasoconstricción periférica y por un gasto y 30 mmHg durante las crisis agudas de hiper-
cardíaco bajo. Si no hay pulso, se deben comenzar tensión intracraneal.
las compresiones torácicas de inmediato. 3. Utilización de diuréticos osmóticos y de asa
Aunque el paciente recupere la conciencia, hay como tratamiento de base inicial en dosis
que transportarlo inmediatamente, monitorizado de bajas
forma constante y oxigenado para evitar las conse- (manitol, 0,5 g/kg). El manitol en dosis más
cuencias de la hipoxia. altas (1 a 3 g/kg) se reserva para el
tratamiento de las crisis agudas de
Tratamiento hospitalario hipertensión intracra- neal.
El tratamiento posterior en un centro especializado 4. Monitorización de la presión intracraneal
descansa en 3 objetivos: (PIC) para tratar de mantenerla por debajo
a) Apoyo respiratorio y hemodinámico. de 20 mmHg, lo que resulta importante para
b) Medidas de protección cerebral. garantizar una adecuada presión de perfusión
c) Tratamiento de las complicaciones. cerebral. Se debe monitorizar en aquellos pa-
cientes que presenten un coma profundo al in-
Apoyo respiratorio y hemodinámico. Tras la RCP greso.
inicial, o si ésta no se ha realizado en forma priorita- 5. La modificación del metabolismo cerebral con
ria, se deben asegurar una oxigenación y una venti- la utilización de barbitúricos en dosis altas fue
lación adecuadas al llegar al servicio de urgencias. un arma terapéutica útil para la reducción de
la PIC. Actualmente se emplean los
Los criterios de intubación en el síndrome de aho-
barbitúricos en dosis bajas para sedación:
gamiento incompleto son sencillos, pues su necesi-
thiopental en per- fusión continua, de 1 a 3
dad es evidente si el paciente precisa RCP o si se
mg/kg/ h.
encuentra en coma profundo, ya que la requiere para
6. No está indicado en nuestros días el uso de
permeabilizar la vía aérea o para el tratamiento por
corticoides para reducir el edema cerebral.
medio de la ventilación mecánica. A veces es preci-
7. La hipotermia de superficie reduce el metabo-
so aplicar concentraciones muy altas de oxígeno para
lismo cerebral, por lo que protege al cerebro
corregir el cortocircuito pulmonar. Desde el punto ante una crisis hipóxica. Disminuye el consu-
de vista pulmonar, la indicación de intubación de- mo de O2 aproximadamente en un 10 % por
pende de la presencia de aspiración abundante de cada grado Celsio.
agua. 8. El tratamiento precoz de las convulsiones pue-
El apoyo hemodinámico tras la reanimación ini- de evitar una lesión cerebral sobreañadida.
cial debe incluir inotrópicos (dopamina, dobutami- Por lo general se utiliza la fenitoína, de forma
na, etc.), expansores y coloides, por el riesgo de prefe- rente, por su menor efecto sobre la
edema cerebral, por lo que es necesario medir la pre- conciencia.
sión venosa central y, si es posible, la presión de
oclusión de la arteria pulmonar, además de la arte- Tratamiento de las complicaciones. Una vez es-
rial. tabilizado el cuadro general, hay que considerar la
Medidas de protección cerebral. Tienen el pro- posibilidad de fracturas o de traumatismos craneo-
pósito de minimizar la lesión cerebral producida por encefálicos, que se tratarán acorde con sus particu-
la hipoxia y sus consecuencias: edema cerebral e laridades. Las alteraciones electrolíticas que se
hipertensión intracraneal. Son las siguientes: presentan generalmente son transitorias, al igual
1. Restricción hídrica mediante aportes líquidos que las complicaciones hematológicas (hemólisis,
calculados al 50 % de las necesidades basales. CID). Estas últimas en ocasiones necesitan del uso
de he- moderivados. La IRA por lo común revierte
con el empleo de diuréticos.
Las complicaciones tardías son la infección se-
cundaria a la aspiración, las lesiones químicas de
584
las vísceras y las secuelas lógicas de un tratamiento gérmenes grampositivos y gramnegativos.
prolongado en una Unidad de Cuidados Intensivos: No hay justificación para el uso de corticosteroi-
barotrauma pulmonar, sepsis o reacción a los fár- des y antibióticos profilácticos en este tipo de
macos utilizados. casos, y la eficacia y rapidez de la reanimación, así
De presentarse complicaciones infecciosas pul- como la respuesta neurológica inicial son los
monares, el tratamiento antibiótico debe cubrir los mejores in- dicadores para establecer un
pronóstico.
585
61
LA ENFERMEDAD RADIACTIVA
El uso de bombas atómicas en 1945 en las ciudades teorías: el efecto directo y el indirecto. El primero
de Hiroshima y Nagasaki, en el Japón, con unas propone que la radiación actúa por golpe directo
100 000 muertes inmediatas a la explosión, ha sido sobre los átomos de las células afectadas y sus es-
un terrible llamado a la humanidad sobre una mala tructuras, que resultarían dañadas, especialmente el
utilización de los conocimientos de la ciencia. De ADN y su capacidad para servir de molde. La
forma lamentable, y en estos casos accidental, se han teoría indirecta plantea que la hidrólisis del agua
producido víctimas en EE.UU., Japón, Brasil y es- produce radicales libres, que actúan sobre el ADN
pecialmente en el gran accidente de la planta de y otras estructuras para causar efectos deletéreos y
Chernobyl, en la antigua URSS, el 26 de abril de modifi- caciones químicas. El efecto biológico
1986: 30 trabajadores muertos, 100 hospitalizados puede no lle- gar a ser aparente en minutos e
y cinco millones de afectados; otra alerta sobre la incluso décadas; por lo tanto, la radiación tiene por
necesidad del uso seguro de la energía nuclear. Más lo común latencia. Actualmente se utilizan nuevas
reciente, en la guerra EE.UU.-Iraq, se ha descrito el unidades de me- dida, como el Gray (Gy), para
llamado síndrome del golfo, producto de la utiliza- medir la absorción
ción de proyectiles dotados de sustancias radiactivas, (1 Gray = 100 Rad). La unidad de dosis colectiva
que los hacen especialmente efectivos. es el sievenet-hombre. El kilobecquerel por m2 es
Como se ve, el uso militar o civil de la energía una unidad de medida de la radiactividad en un área
nuclear es una nueva causa de enfermedad, y con dada por m2. Un millisievert (mSv) equivale a la
una letalidad no sospechada. Los sistemas de pro- exposi- ción a 50 Rx de tórax. En resumen, el
tección de los trabajadores en estas fuentes son de Gray es una medida de absorción, el millisievert de
gran seguridad y la Comisión Internacional de Pro- exposición y el kilobecquerel es una unidad de
tección Radiológica ha establecido dosis límites por medida de la ra- diactividad en un área
año de 1 mSv (millisievert) para el público y de 20 mSv determinada.
para los trabajadores.
Cuadro clínico
Patogenia Las manifestaciones clínicas están en relación con
Cuando se utiliza la energía nuclear como un arma la dosis y siempre suponiendo irradiación corporal
de guerra, y ese fue el caso de las ciudades japone- total. Hay formas sobreagudas, agudas, crónicas y
sas ya citadas, los efectos vulnerantes sobre las per- secuelas tardías.
sonas obedecen a múltiples factores: la onda Cuando el paciente recibe dosis de entre 500
expansiva, la irradiación luminosa, la radiación pe- y 700 Rad (5 a 7 Gy), y hasta 5 000 Rad (50 Gy), la
netrante y la contaminación del terreno, aparte de muerte ocurre en el 100 % de los casos. Si la dosis
los derrumbes e incendios, todo lo cual constituye alcanza entre 300 y 500 Rad (3 a 5 Gy), se
un conjunto demoníaco capaz de producir muchas producen náuseas y vómitos el primer día, y
víctimas. La radiación penetrante está constituida por después fiebre, hemorragias y diarreas. El 50 % de
radiaciones alfa y beta de poca penetración y radia- los casos fallece al mes. Si la dosis recibida es de
ciones X y gamma de gran penetración. Los efectos 200 a 300 Rad (2 a 3 Gy), la supervivencia puede
a nivel celular desde hace años se explican por dos ser de 80 % y re- quieren unos 6 meses para
recuperarse. Por debajo de estas dosis no hay
fallecidos, sólo manifestacio- nes digestivas y
hematopoyéticas.

586
Son realmente terribles las consecuencias tardías de generación en lugares en que se utiliza la
de la exposición radiactiva. En el accidente de energía nuclear, ya sea en la medicina, la
Chernobyl se reportó cáncer del tiroides en niños, agricultura o la industria.
con cifras muy altas. Así, en 1986 se conocieron en La medición de la actividad radiactiva y el cua-
tres países de la antigua URSS 10 casos de cáncer dro clínico posterior, ya sea inmediato o tardío a un
del tiroides al año, y para 1994, 130 casos por año acontecimiento como los referidos, deben hacer
en los mismos países. sos- pechar la enfermedad.
En Japón, meses o años más tarde después del
bombardeo atómico, aparecieron diversos tipos de Tratamiento
neoplasias, con una incidencia incrementada de has-
ta 20 veces en las leucemias agudas. Otros cánceres En muchas enfermedades la profilaxis es lo más
del tubo digestivo, pulmón, glándulas salivales y víasde- seable, y así ocurre en ésta. Las medidas serán
urinarias tuvieron también un notable incremento. sobre todo de sostenimiento, como hidratación,
Diagnóstico uso de antibióticos, transfusiones y hasta la
Casi siempre los afectados se relacionan con un acon- posibilidad de trasplante medular. Los casos de
tecimiento militar o con un accidente en una planta más de 700 Rad
(7 Gy) son prácticamente intratables.
587
62
CHOQUE O SHOCK ELÉCTRICO
La electricidad es ampliamente utilizada en todos directos de la corriente y de la conversión de ésta
los aspectos de la vida y posee aplicaciones comer- en calor al atravesar los tejidos del organismo.
ciales desde 1849, pero resulta necesario ofrecer al- La electricidad puede ser atmosférica (el rayo) o
gunos conceptos básicos para que se comprenda industrial, de alto o de bajo voltaje. La electricidad
mejor este tema. industrial ocasiona accidentes que se denominan
Corriente eléctrica. No es más que un flujo de electrocución, y se llama fulguración a los produci-
electrones, desde un punto de mayor potencial a otro dos por la electricidad atmosférica. Las lesiones
menor. potenciales consisten en anomalías fisiológicas y
Corriente directa (DC). Es la corriente eléctrica quemaduras.
que circula de modo continuo en una misma direc-
ción. En ella la dirección del flujo y la cantidad de Frecuencia
corriente son constantes. La posibilidad de lesión eléctrica que ponga en
Corriente alterna (AC). Es la corriente eléctrica peli- gro la vida existe en todas las zonas
que invierte su sentido de circulación periódicamente,electrificadas: el hogar, la escuela, la industria, la
o sea, la dirección del flujo y la cantidad de corrien-
agricultura, los parques de diversiones y hasta en
te cambian en la unidad de tiempo. los hospitales.
Ciclo. Es el período de tiempo desde la cresta de El choque eléctrico se debe a descuido, ignoran-
una onda eléctrica hasta la de la próxima que la cia, instrumentos o equipos defectuosos, o a un
sigue. acto de la naturaleza: el rayo. El uso sistemático
Frecuencia. Es el número de veces que aparece de los equipos hospitalarios (electrocardiógrafos,
la onda eléctrica en un segundo. Su unidad de medi- aparatos de succión, camas operadas por
da es el Hertz (ciclos/segundo). electricidad, apara- tos de Rx, etc.) significa un
Voltaje. Es la fuerza mediante la cual los electro-peligro potencial, por lo que su instalación, manejo
nes son impulsados. Su unidad de medida es el vol- y mantenimiento cuida- doso por un personal
tio (V). experto en estos aparatos, dis- minuyen este riesgo.
Resistencia. Es la fuerza que se opone al paso de Los accidentes por electricidad son más frecuen-
la corriente eléctrica. Su unidad de medida es el tes de lo que en realidad se cree y en los Estados
ohmio. Unidos se notifican unos 5 000 anuales que requie-
Ley de Ohm. Establece la relación entre corrien- ren de tratamiento médico, y entre 800 y 1 000 fa-
te, voltaje y resistencia. Enuncia que la corriente que
llecidos. De ellos un tercio corresponde a
circula en un circuito (I) es igual al voltaje (E) divi-
accidentes caseros y por electricidad atmosférica,
dido por la resistencia (R): I=E/R pero el ma- yor porcentaje es debido a accidentes
Ampere. Es la unidad de corriente eléctrica (in- laborales.
tensidad). Los estudios realizados demuestran que aproxi-
madamente el 1 % de las muertes por accidentes en
Concepto general se deben a shock eléctrico, y que el 25 %
El choque eléctrico es el daño causado por el paso de este total es causado por la electricidad
de la corriente eléctrica a través de los tejidos del atmosférica. Patogenia
cuerpo. La lesión eléctrica resulta de los efectos
1. En relación con la corriente eléctrica.

588
Los factores que determinan la naturaleza y seve- Las palmas de las manos o las plantas de los pies
ridad del daño eléctrico con respecto a la corriente recubiertas de callosidades llegan a tener una resis-
incluyen: tencia de 2 a 3 millones de ohm/cm².
c) La vía de conducción de la corriente. El punto
a) Tipo y magnitud de la corriente eléctrica. más común de entrada de la electricidad es la
b) La resistencia corporal en el punto de con- mano, seguida de la cabeza, y la salida más
tacto. común es el pie. Un contacto con el dorso de la
c) La vía de conducción de la corriente. mano es menos peligroso, pues determina una
d) La duración del contacto con el flujo eléctrico. extensión súbita de los dedos que provoca la
a) Tipo y magnitud de la corriente eléctrica. La separación del electrodo; mientras que un contacto
corriente directa es menos peligrosa que la con la región palmar re- sulta muy peligroso, pues
produce la flexión súbita de los dedos y el
alterna, ya que sus efectos sobre el cuerpo
aprisionamiento del electrodo en- tre ellos.
dependen funda- mentalmente de la frecuencia.
El trayecto de la corriente a través del cuerpo re-
La alterna de baja fre- cuencia, de 50 a 60 Hertz
sulta crucial para determinar las lesiones. La con-
(ciclos/s), es más peligrosa que la de alta
ducción de brazo a brazo o entre un brazo y una
frecuencia, y es de 3 a 5 veces más dañina que la pierna a potencial tierra, es mucho más peligrosa
directa del mismo voltaje y amperaje. La que el contacto entre una pierna y la tierra, ya que
corriente directa produce una contracción en los primeros la corriente puede atravesar el co-
convulsiva que a menudo separa a la víctima del razón.
foco de contacto y evita una mayor exposición a la d) La duración del contacto con el flujo eléctri-
corrien- te. La alterna de 60 Hertz causa tetania co. La duración del flujo de corriente por el cuerpo
muscular, que en ocasiones suele “congelar” por es importante, ya que mientras el corazón es vulne-
largo tiempo la mano de la víctima sobre el rable a corrientes de voltajes relativamente bajos, la
circuito eléctrico; tie- nen lugar así quemaduras gravedad de la lesión corporal es de forma directa
severas si el voltaje es alto. Generalmente, cuanto proporcional a la duración de la exposición, pues
mayores son el voltaje y el amperaje, mayor es las alteraciones hísticas ocurren con las exposicio-
la lesión causada por cualquier nes de mayor duración, que permiten un flujo inter-
tipo de corriente. no de corriente.
Tanto la corriente alterna como la directa afectan El calor se produce al pasar la corriente a través
al organismo provocando alteraciones de las fun- de los tejidos, lo que causa serias quemaduras, coa-
ciones fisiológicas o lesiones térmicas, electroquí- gulación de las proteínas, trombosis vascular y ne-
micas o de otro tipo (quemaduras, hemólisis, crosis hística.
deshidratación, necrosis del músculo y otros tejidos, La víctima de un rayo es raro que sufra de que-
fracturas vertebrales, avulsiones musculares y de maduras internas o externas, a pesar del elevado
tendones, etc.). El shock eléctrico causa a menudo voltaje, porque la duración del flujo de corriente es
una combinación de todos estos efectos. extremadamente corto y no es suficiente para cau-
Por su magnitud, la corriente de alta tensión (más sar alteraciones cutáneas.
de 1 000 V) provoca los daños más serios, aunque a Una corriente alterna de 60 Hertz y de bajo
veces ocurren electrocuciones fatales con corriente volta- je (110 a 220 V) por vía transtorácica
de bajo voltaje (110V). durante una fracción de segundo, es capaz de
b) La resistencia corporal en el punto de contac- provocar fibrila- ción ventricular con corrientes tan
to. La resistencia corporal (medida en ohm/cm²) está bajas como de 60 a 100 miliamperes; mientras que
concentrada primariamente en la piel y varía con las para la corriente directa se requerirían de 300 a
condiciones de ésta. Si se encuentra seca, bien que- 500 miliamperes.
ratinizada e intacta, tiene una resistencia de 20 000 a
30 000 ohm/cm². Sin embargo, cuando está húmeda, 2. En relación con el organismo.
disminuye a 500 ohm/cm² y si tiene soluciones de El daño por el contacto eléctrico es más severo en
continuidad o se mide directamente en las mucosas las extremidades, a causa de su menor área
(boca, vagina, recto), la resistencia puede ser mu- transversa por unidad de corriente en comparación
cho más baja, del orden de los 200 a 300 ohm/cm². con el tronco;
589
pero en los puntos de contacto, por donde entra y En los puntos de contacto eléctrico, la piel se
sale la corriente, el daño es aún más grave. encuentra edematosa y rodeada de un área arru-
La resistencia de los tejidos varía de mayor a gada y deprimida si el choque fue por bajo voltaje.
menor en el siguiente orden: hueso, grasa, tendón, Si ocurrió por alto voltaje, estará seca, arrugada y
piel, músculo, sangre y nervio. Los vasos sanguí- carbonizada.
neos son particularmente muy buenos conductores En general, suelen estar afectados todos los
al comportarse como tuberías llenas de soluciones siste- mas de la economía.
electrolíticas, lo que ocasiona necrosis por coagula-
ción de los pequeños vasos. Los grandes vasos, al Sistema cardiorrespiratorio
poseer mayor flujo, disipan el calor y evitan el daño. Los accidentes que ocurren en bañeras con
El hueso resiste más el paso de la corriente eléc- circuitos de 110 V, donde se establece un
trica, pero en él se genera calor por ésta, que poste- contacto húmedo
riormente se irradia y provoca un daño térmico (conexión a tierra), no presentan quemaduras, pero
mantenido de los músculos y de las estructuras ad- sufren un paro cardiorrespiratorio. Cuando tiene lu-
yacentes. Este mecanismo causa la muerte de los gar el fallo respiratorio, las respiraciones desapare-
músculos cercanos al hueso. cen, la persona está inconsciente, pero hay pulso,
La lesión muscular libera potasio, hemoglobina con disminución de la presión arterial. La piel está
y mioglobina, que aumentan en la sangre y ocasio- fría, cianótica y se aprecian petequias en la nuca y
nan necrosis tubular e IRA. espalda. La cara y las orejas adquieren un tinte vio-
Al pasar la corriente por los centros bulbares pro- láceo con manchas oscuras. Se observan hemorra-
voca inhibición de éstos si supera los 5 000 V, lo gias subconjuntivales. A este tipo se le denomina
que se traduce por paro respiratorio. “electrocutado azul” .
Las alteraciones cardiovasculares son las de ma- Cuando se produce el paro cardíaco no se
yor importancia y se deben a: encuen- tran ruidos cardíacos o pulsos, y el
accidentado está inconsciente, las respiraciones
a) Acción directa sobre el haz de His. continúan por breves minutos para luego
b) Agotamiento ventricular por contracción ven- desaparecer y después muere. El paciente está
tricular intensa al paso de la corriente. pálido, pero no cianótico y se le denomina
c) Fibrilación ventricular con corrientes superio- “electrocutado blanco” .
res a 70 mA durante 5 s. Hay casos con un patrón electrocardiográfico de
d) Alteraciones vasomotoras con hipertensión ar- isquemia subepicárdica. Se cree que las arritmias
terial y estasis en el territorio capilar y venoso. supraventriculares son transitorias, pero esto no
está confirmado. Las más peligrosas son las
Manifestaciones clínicas ventricu- lares.
Están determinadas, entre otros aspectos, por la per-
sonalidad biológica del paciente, lo que explica que Sistema digestivo
bajo circunstancias aparentemente iguales se pro- En las vías digestivas se encuentran íleo paralítico,
duzcan accidentes mortales en unos y en otros no. úlceras de stress y perforación o necrosis del estó-
Entre los factores predisponentes se señalan el mago, hígado, vesícula, intestino y de la
musculatu- ra retroperitoneal.
hambre, la sed, la fatiga, las emociones y las insola-
ciones. Existen enfermedades de importancia deno-
Sistema urinario
minadas preeléctricas, como las cardiopatías, las
Se presentan hemoglobinuria o mioglobinuria e IRA.
infecciones pulmonares y las nefritis.
El choque eléctrico provoca la caída de la persona
Sistema nervioso
al suelo o lanza a ésta lejos de la fuente de corriente,
La pérdida de la conciencia habitualmente sigue al
además de presentar contracciones musculares se-
contacto con el alto voltaje y dura minutos u horas,
veras y tetania, que pueden acompañarse de fractu-
pero a veces se prolonga. También hay cefalea,
ras y dislocaciones, así como de hernias de discos fati- ga e irritabilidad nerviosa, trastornos en la
intervertebrales. atención, la concentración y la memoria, y de
manera tardía, polineuropatías, distrofias
simpáticas reflejas,
590
monoplejías, hemiplejías, paraplejías o cuadriplejías, Fosfocinasa de creatina. A veces está elevada en
que desafortunadamente casi siempre son perma- la sangre si el paciente presenta mioglobinuria.
nentes. Tratamiento
Las lesiones por fulguración son por lo general
Por lo común las lesiones eléctricas resultan de ac-
superficiales, rara vez dejan huellas de entrada y
salida y no afectan las estructuras profundas, fenó- cidentes potencialmente fatales, por lo que se
meno que se conoce con el nombre de flashover. En requiere que el médico se familiarice con sus
la piel se observan lesiones arborizantes o serpigi- manifestacio- nes y posibles complicaciones, pues
nosas de aspecto característico. muchas vícti- mas electrocutadas mueren antes de
El paro cardíaco consecutivo al rayo por lo común que se las pueda ayudar. Las que sobreviven con
se produce por asistolia más que por fibrilación ven- frecuencia sufren lesiones graves que requieren de
tricular y su índice de respuesta a la reanimación un tratamiento ade- cuado.
resulta superior a los de otra causa, por lo que deben
iniciarse las maniobras de RCP aun en aquellos apa- Tratamiento preventivo
rentemente fallecidos y no suspenderse mientras no Lo más importante es la profilaxis de estos
aparezcan los signos de la muerte cerebral. acciden- tes. Las medidas de protección física en
En el cuadro 62.1 se presentan algunas de las los centros laborales y las de seguridad adoptadas
manifestaciones clínicas de la entidad. en la indus- tria, centros de trabajo y en el hogar,
son pilares bá- sicos para evitar los accidentes
CUADRO 62.1
MANIFESTACIONES CLÍNICAS DEL CHOQUE
eléctricos.
ELÉCTRICO La prevención de las lesiones por electricidad re-
quiere de un diseño, una instalación y un manteni-
Musculoesqueléticas Gastrointestinales miento adecuados de todos los dispositivos
• Mionecrosis. • Náuseas y vómitos.
• Síndrome compartimental. • Úlcera de stress.
eléctricos. Resultan esenciales la educación de los
• Fracturas óseas. • Íleo. hábitos y una obediencia de las normas de utiliza-
• Fracturas por compresión. • Perforación intestinal. ción, así como mucho sentido común y respeto
cuan- do se manipule la electricidad.
Quemaduras Renales y metabólicas
• Necrosis tubular aguda. Potencialmente cualquier dispositivo eléctrico que
Cardíacas • Acidosis láctica. toque o existe la posibilidad de ser tocado por el
• Fibrilación ventricular. cuerpo amenaza la vida, por lo que debe de estar
• Asistolia. Neurológicas conectado de forma adecuada a la tierra e incorpo-
• Taquicardia sinusal. • Pérdida de la conciencia.
• Fibrilación auricular. • Confusión. rársele circuitos protectores.
• Infarto del miocardio. • Convulsiones. Frente al rayo, son esenciales el sentido común,
• Alteraciones en el ECG. • Parálisis. el uso de sistemas eficaces de protección y la cos-
• Aumento de la isoenzima • Mielitis transversa. tumbre de guarecerse en lugares seguros durante
MB-CPK. • Neuropatía periférica.
Vasculares las tormentas.
• Trombosis arterial/venosa. Oftálmicas
• Ruptura arterial. • Cataratas. Tratamiento prehospitalario
• Aneurismas. • Iritis recurrente. Inicialmente consiste en alejar al paciente del punto
de contacto, restablecer de inmediato las funciones
Exámenes complementarios vitales y, de ser necesario, facilitar los cuidados
Hemograma. Es común encontrar una leucocitosis com- plementarios.
con predominio de polimorfonucleares. La interrupción del contacto entre la víctima y el
Examen de orina. Es frecuente la albuminuria y conductor eléctrico se realiza mediante la desco-
es posible hallar mioglobinuria/hemoglobinuria. nexión de la corriente, o tratando de alejar a la per-
Líquido cefalorraquídeo. Ocasionalmente hay sona del contacto. Lo mejor, si es posible realizarlo
aumento de su presión en la manometría, así como rápidamente, es desconectar la corriente.
presencia de sangre a causa de las lesiones vascula- Si el accidente se produce con bajos voltajes (110
res generalizadas. a 220V), el socorrista debe estar seguro de que él
591
mismo se encuentra bien aislado de tierra y utilizar CUADRO 62.2
un material aislante como tela, madera seca, cuero o INDICACIONES DE INGRESO
goma, para liberar a la víctima. Si se trata de líneas Y MONITORIZACIÓN DESPUÉS DEL SHOCK
de alto voltaje, es mejor esperar a que se corte la
corriente. A veces no es fácil diferenciar fuera de • Antecedentes de enfermedad cardiovascular.
• Paso transtorácico de la corriente.
los edificios qué línea es de alto o bajo voltaje. • Dolor torácico o hipoxia.
Tan pronto como el accidentado pueda ser explo- • Paro cardíaco.
rado, es necesario realizar un examen rápido de las • Alteraciones en el ECG.
funciones vitales (respiratoria, cardíaca y neuroló- • Tetania.
• Pérdida de la conciencia.
gica). • Fulguración.
La prioridad la posee la estabilidad de las vías • Quemaduras o lesiones traumáticas graves.
aéreas. Si no se observa respiración espontánea o se
ha producido el paro cardíaco, son necesarias de in-
inspiraciones profundas, además de establecer un
mediato las maniobras de RCP.
se- guimiento por medios gasométricos. El personal
Una vez restablecidas las funciones vitales, se
de enfermería debe estar entrenado en la búsqueda
evalúan la naturaleza y extensión de la lesión y se
de signos de hipoxia, como intranquilidad, disnea,
tratan. Se han de buscar dislocaciones, fracturas, ta- quicardia y cianosis.
lesiones de la columna cervical y contusiones. Las arritmias cardíacas aparecen precozmente,
Se utilizará el collarín cervical hasta que se ex- pero el enfermo necesita control cardiovascular con
cluya la posibilidad de lesión de dicha zona, y se
monitores, por si se presentasen taquicardia sinusal,
procederá a buscar los puntos de contacto de la
extrasistolia ventricular y bloqueos AV. Los ECG
corriente por la posibilidad de daño en ese sitio.
seriados permiten detectar las manifestaciones
Al igual que en otros pacientes traumatizados, se isquémicas del miocardio, y con respecto a las de-
debe vigilar su estado respiratorio, administrar O2 y
terminaciones enzimáticas en la sangre, se debe re-
proceder a la intubación endotraqueal al primer sig- cordar que a veces están elevadas por el daño
no de insuficiencia respiratoria.
muscular.
Es posible que se necesiten grandes volúmenes
Las afecciones vasculares provocan edema de
de líquidos; los mejores resultados se obtienen con
los miembros, que mejora elevándolos. La
la solución Ringer, 2 a 4 ml/kg/área corporal lesio-
atenuación o desaparición del pulso en los
nada, que se ajustarán según la diuresis que se ob-
miembros superio- res o inferiores debe ser
tenga.
notificada de inmediato, pues puede ser necesaria
Las arritmias cardíacas resultan frecuentes en es-
una fasciotomía u otra inter- vención quirúrgica
tos pacientes, por lo que es necesario monitorizar
de urgencia para salvar un miembro.
dicha esfera y realizar un ECG de 12 derivaciones.
Si hay presencia de mioglobinuria, están indica-
dos los aportes de líquidos y diuréticos (manitol,
Cuidados hospitalarios furosemida) para aumentar el flujo renal y
Estos pacientes necesitan por lo general, la reani- mantener una diuresis de 100 ml/h, así como
mación cardiorrespiratoria, el control mediante la alcalinizar la orina con bicarbonato para evitar
monitorización y las medidas de sostén de las cons- que se precipite la mioglobina en los túbulos
tantes vitales, por lo que se deben de ingresar y renales.
monitorizarlos por lo menos durante 24 h si se en- Si el enfermo se encuentra estable desde el punto
cuentra alguno de los elementos señalados en el cua- de vista hemodinámico, es conveniente elevar la
dro 62.2. cabeza 30º para disminuir la hipertensión intracra-
El paso de la corriente eléctrica a través del tórax neal.
provoca alteraciones pulmonares; por ello hay que No se debe olvidar, en el medio en que esto sea
realizar un examen clínico del aparato respiratorio posible, la realización de una TAC ante cualquier
cada 4 h, estimular al paciente a que tosa y haga alteración de la conciencia, por la posibilidad de
sangramiento intracraneal.
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Deben buscarse las manifestaciones clínicas po- heridas, si se han producido. Ello incluye la cura
sibles en todos los sistemas orgánicos, para su diag- diaria con aplicación tópica del acetato de
nóstico precoz y tratamiento oportuno. Tener en mafenide o sulfadiazina de plata, el uso de la
mente el íleo, el sangramiento digestivo, las trom- penicilina crista- lina EV para evitar las
bosis venosas y las lesiones de órganos abdomi- infecciones por anaerobios, el debridamiento
nales. quirúrgico y el tratamiento final en unión del
No olvidar la profilaxis del tétanos, y recordar caumatólogo, mediante injertos y la transferencia
siempre el tratamiento local de las quemaduras y de tejido libre.
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