Вы находитесь на странице: 1из 17

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

PODER JUDICIAL

JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA EN LO CIVIL Y MERCANTIL


DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ARAGUA.

Maracay 18 de febrero del 2011.-

200° Y 151°

PARTE ACTORA: E.G.M.G., venezolana, mayor de edad, titular de la cedula de


identidad Nº V-7.207.764.-

APODERADO JUDICIAL DE LA PARTE ACTORA: J.H.C., inscrito en el


Inpreabogado bajo el Nº 54.834.-

PARTE DEMANDADA: E.A.S.B., venezolano, mayor de edad, titular de la cedula


de identidad Nº V-1.585.881.-

APODERADAS JUDICIAL DE LA PARTE DEMANDADA: W.R.R. y HEISA


CORREA PADILLA, inscritos en el Inpreabogado bajo los Nos. 99.518 y 101.008,
respectivamente.-

MOTIVO: PARTICIÓN DE LA COMUNIDAD CONYUGAL (Sentencia


definitiva).

EXPEDIENTE: Nº 38547 (Nomenclatura de este Tribunal)

Se inician las presentes actuaciones en fecha 2 de agosto de 2006 con motivo de


demanda que por Partición de la Comunidad Conyugal interpuso la ciudadana
E.G.M.G., antes identificada, contra el ciudadano E.A.S.B., también identificado.
(Folios 22).

Admitida como fue la misma en fecha 8 de agosto de 2006, se ordenó emplazar a la


parte demandada. (Folio 23).

Por auto de fecha 18 de septiembre de 2006, este Tribunal libró la compulsa de


citación ordenada. (F. 25 y 26).

Mediante diligencia de fecha 25 de septiembre de 2006, el apoderado judicial de la


parte actora consignó reforma de la demanda. (Folios 27 al 31).

Este Tribuna el 29 de septiembre de 2006, admitió la reforma de la demanda. (Folio


32).

Seguidamente, se observa que en fecha 7 de noviembre de 2006 se libró nuevamente


compulsa a la parte demandada. (Folios 41 y 42).

Por medio de diligencia de fecha 5 de diciembre de 2006, el alguacil para la fecha,


ciudadano R.R., manifestó la imposibilidad de efectuar la práctica de la citación.
(Folio 43).

Posteriormente, el apoderado judicial de la parte actora en fecha 5 de diciembre de


2006, solicitó la citación personal de la parte demanda, a través de otro Alguacil o
Notario de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana que el considerare, de
conformidad con lo establecido en el articulo 345 del Código de Procedimiento Civil,
lo cual fue acordado por el Tribunal en fecha 24 de enero de 2007, por lo que se libró
la boleta de citación correspondiente. (Folios 55 al 57).

En fecha 24 de enero de 2007, la representación judicial de la parte actora, recibió la


boleta de citación de la parte demandada. (Folio 58).

Por medio de diligencia de fecha 18 de julio de 2007, el abogado J.H.C.M., inscrito


en el Inpreabogado bajo el No. 54.834, consignó la comisión remitida al Juzgado
Superior Octavo de lo Contencioso Administrativo de la Región Capital con S. en
Caracas, a los fines de que practicara la citación personal de la parte demandada, de
ésta se evidencia la imposibilidad de dicho Juzgado para efectuar la practica de la
mencionada citación, y a su vez, solicitó la citación de la parte demandada por
carteles. (Folios 59 al 73).

Este Tribunal en fecha 9 de agosto de 2007, libró la citación de la parte demandada


por carteles, para ser publicados en los diarios El Periodiquito y El Aragüeño de esta
ciudad de Maracay. (Folios 74 y 75).

Por medio de diligencia de fecha 9 de julio de 2007 el abogado J.H.C.M., inscrito en


el Inpreabogado bajo el No. 54.834, retiró los carteles de citación para su publicación.
(Folio 76).

Asimismo, en fecha 19 de septiembre de 2007 la representación judicial de la parte


actora, consignó los carteles de citación debidamente publicados. (Folios 77 al 79).

La abogada HEISA CORREA PADILLA, inscrita en el Inpreabogado bajo el No.


101.008, apoderada judicial de la parte demandada, en fecha 10 de octubre de 2007
consignó poder especial que les fuera otorgado a su persona y al abogado W.R.R.,
inscrito en el Inpreabogado bajo el No. 99.518, por el ciudadano E.A.S.B., titular de
la cédula de identidad No. V-1.585.881, y a su vez, se dio por citado en el presente
juicio. (Folio 80 al 82).

Por medio de diligencia de fecha 5 de noviembre de 2007, el apoderado judicial de la


parte actora, solicitó se fijara oportunidad para el nombramiento del partidor. (Folio
83).

Seguidamente, en fecha 13 de noviembre de 2007 el abogado JOSE


HILDEMACELIS, inscrito en el Inpreabogado bajo el No. 54.834, propuso como
partidor al abogado L.A.B., inscrito en el Inpreabogado bajo el No. 14.909, el cual
aceptó el nombramiento recaído en su persona. (Folio 84).

En esa misma fecha, la representación judicial de la parte demandada, consignó


escrito de contestación a la demanda y a su vez, solicitó cómputo del lapso para la
contestación a la demanda. (Folios 85 al 87).

Mediante diligencia de fecha 22 de noviembre de 2007, la representación judicial de


la parte actora solicitó que fuera declarada extemporánea la contestación de la
demanda conjuntamente con su reconvención. (Folio 88).

Este Tribunal en esa misma fecha, realizó el computo solicitado de los días
transcurridos para el lapso de contestación a la demanda, admitió la reconvención
interpuesta por la parte demandada reconviniente y ordenó emplazar para el quinto
(5to) día de despacho siguiente al auto en cuestión, a la parte actora reconvenida.
(Folios 89 y 90).

En fecha 5 de diciembre de 2007 la representación judicial de la parte actora


reconvenida, dio contestación a la reconvención. (Folio 91).

La apoderada judicial de la parte demandada y reconviniente en fecha 11 de enero de


2008, consignó escrito promoviendo pruebas. (Folio 92).
Este Tribunal previo cómputo necesario, en fecha 17 de enero de 2008, agregó el
escrito de pruebas promovido por la parte demandada y reconviniente en el presente
juicio. (Folios 94 al 97).

Por medio de auto de fecha 25 de enero de 2008, se admitieron las pruebas


promovidas por la parte demandada y reconviniente, y libró oficios No. 112-08
dirigido al Fondo Nacional de Desarrollo Urbano (F.O.N.D.U.R) y No.113-08,
dirigido al Gerente de la División de Bienestar y Seguridad Social del Instituto de
Previsión Social de las Fuerzas Armadas (I.P.S.F.A), dirección de personal civil de
Caracas Distrito Capital. (Folios 98 al 100).

El abogado J.H.C.M., apoderado judicial de la parte actora y reconvenida, en fecha 27


de marzo de 2008 consignó copia simple del “Certificado de Adjudicación” de
Vivienda de fecha 14 de febrero de 2008, identificado con el No. 050030070096,
cuyo adjudicatario es el ciudadano E.S.B., sobre una vivienda identificada con el No.
L-0265, tipo B., en el Sector “Los Laureles” de la Urbanización Montaña Fresca del
Estado Aragua. (Folios 101 y 102).

Mediante diligencia de fecha 23 de abril de 2008, el apoderado judicial de la parte


actora y reconvenida, ratificó el escrito consignado por su persona en fecha 27 de
marzo de 2008. (F. 103).

En fecha 7 de mayo de 2008, se agregó a los autos oficio No. 320-600-346 de fecha
25 de marzo de 2008, proveniente del Instituto de Previsión Social de la Fuerza
Armada. (Folios 104 y 105).

Los apoderados judiciales, tanto de la parte actora reconvenida, como de la parte


demandada reconviniente, mediante diligencias de fechas 12 de agosto, 14 de
septiembre y 28 de octubre de 2008, solicitaron el abocamiento del Juez Provisorio de
este Juzgado para la fecha, quien se abocó en fecha 3 de noviembre de 2008. (Folios
106 al 108).

Por medio de diligencia la representación judicial de la parte demandada y


reconviniente, en fecha 17 de noviembre de 2008, solicitó que se enviara nuevamente
oficio dirigido al Gerente de la División de Bienestar y Seguridad Social del Instituto
de Previsión Social de las Fuerzas Armadas (IPSFA), por cuanto no constaba en autos
resultas del oficio No. 113-08 anteriormente enviado a dicho ente. (Folios 109 y 110).

En fecha 12 de enero de 2008 se agregaron resultas provenientes del Fondo Nacional


de Desarrollo Urbano. (Folios 111 al 115).

La apoderada judicial de la parte demandada y reconviniente, mediante diligencias de


fechas 9 de febrero y 13 de marzo de 2009, ratificó la diligencia de fecha 17 de
noviembre de 2008. (F. 116).

Este Juzgado en fecha 25 de marzo de 2009, negó la solicitud efectuada por la


representación judicial de la parte actora, de que se oficiara nuevamente al Gerente de
la División de Bienestar y Seguridad Social del Instituto de Previsión Social de las
Fuerzas Armadas (IPSFA). (F. 118).

Mediante diligencia de fecha 25 de enero de 2010, la representación judicial de la


parte demandante, solicitó que se oficiara a la oficina del Instituto de Previsión Social
de las Fuerzas Armadas (IPSFA) Caracas, a los fines de que remitiera el corte de
cuenta de las prestaciones sociales y demás derechos laborales que tenia acumulado
la parte demandada y a su vez, que se ordenara la retención de dichos montos,
correspondiente a su representada por la comunidad conyugal. Lo cual fue negado por
este Tribunal en fecha 9 de febrero de 2010. (Folios 120 y 121).
Seguidamente, en fecha 12 de febrero de 2010 la representación judicial de la parte
actora, insistió en lo solicitado mediante diligencia de fecha 25 de enero de 2010,
anteriormente señalado. (F. 122).

El abogado J.H.C., inscrito en el Inpreabogado bajo el No. 54.834, en su carácter de


apoderado judicial de la parte actora, en fecha 21 de abril de 2010 solicitó el
abocamiento de esta Sentenciadora, quien por auto de fecha 27 de abril de 2010, dio
cumplimiento de lo solicitado y libró notificación a la parte demandada. (Folios 124 y
125).

La Alguacil de este Tribunal en fecha 2 de agosto de 2010, dejó constancia de haber


efectuado la práctica de la notificación de la parte demandada. (F. 126).

El apoderado judicial de la parte actora en fecha 19 de octubre de 2010, solicitó se


oficiara al Gerente de Bienestar y Seguridad Social del Instituto de Previsión Social
de las Fuerzas Armadas de Caracas, a los fines de que le hiciera entrega del cheque
correspondiente a su representada, por tratarse de un derecho adquirido a través de la
comunidad conyugal. Lo cual fue negado por este Tribunal en fecha 27 de octubre de
2010, y se libró oficio a dicha institución a los fines de verificar si efectivamente fue
expedido cheque a favor de la parte actora. (Folios 131 al 133).

En fecha 22 de diciembre de 2010 se agregaron resultas provenientes del


departamento de Bienestar y Seguridad Social del Instituto de Previsión Social de las
Fuerzas Armadas de Caracas, en el cual informan que efectivamente encuentran
retenida una cantidad correspondiente al cincuenta por ciento (50%) de la asignación
de antigüedad del lapso que duro la unión matrimonial, haciendo la salvedad que se
encuentran en espera que las partes liquiden la referida comunidad conyugal. (Folios
136 y 137).

Una vez realizado el recuento de las actuaciones determinantes en el presente


proceso, esta Sentenciadora pasa a pronunciarse previo resumen de los alegatos
expuestos por las partes de este proceso.

II

ALEGATOS DE LAS PARTES

ALEGATOS DE LA PARTE ACTORA:

Que contrajo matrimonio con el ciudadano E.A.S.B., militar activo, titular de la


cedula de identidad No. V-1.585.881.

Que el matrimonio se llevó a cabo por ante el Jefe Civil de la Parroquia Joaquín
Crespo del Municipio Autónomo Girardot del Estado Aragua.

Que fijaron su domicilio conyugal en esta ciudad de Maracay.

Que en fecha 25 de abril de 2006 introdujo por ante la el Juzgado de Protección del
Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Aragua, la Solicitud
de Divorcio de conformidad con el articulo 185- A del Código de Civil, y en dicha
solicitud fue ordenada la ejecución en fecha 28 de junio de 2006, de la Sentencia que
quedó definitivamente firme.

Que el demandado, según inspección realizada en fecha 14 de julio de 2006 por el


Juzgado Segundo de los Municipios Girardot y M.B.I. de esta Circunscripción
Judicial, declaró que posee una documentación de F.O.N.D.U.R, del año 2001, en
consecuencia de ello, el inmueble es de la comunidad conyugal.

Que en virtud de que su ex-cónyuge ha pretendido evadir la liquidación y partición de


bienes de la comunidad conyugal, es por lo que demanda la disolución y liquidación
de la misma, que esta conformada por, un inmueble ubicado en la Urbanización
“MONTAÑA FRESCA”, Avenida Los Laureles, No. 265 de la Jurisdicción del
Municipio Girardot del Estado Aragua, la cual tenía al momento de intentar la
demanda, un valor aproximado de CIENTO VEINTE MILLONES BOLÍVARES
(Bs. 120.000.000,00), y los beneficios que le correspondan de los frutos devengados
de su profesión como militar, en un cincuenta por ciento (50%), donde deben
incluirse prestaciones sociales por antigüedad, fideicomiso, bonos y cualquier otros
porcentajes que pueda corresponderle conforme el articulo 78 de la L.O.P.S.F.A., en
concordancia con los artículos 156 en sus numerales 2 y 3, 158 del Código Civil y el
articulo 761 del Código de Procedimiento Civil.

ALEGATOS DE LA PARTE DEMANDADA

La representación judicial de la parte demandada en su escrito de contestación a la


demanda, alegó lo siguiente:

En su particular primero expuso:

Rechazó, negó y contradijo que el inmueble ubicado en la Urbanización MONTAÑA


FRESCA, avenida Los Laureles, No. 265 de la Jurisdicción del Municipio Girardot
del Estado Aragua, el cual supuestamente tiene un valor de CIENTO VEINTE
MILLONES DE BOLÍVARES (Bs. 120.000.000,00) pertenezca a la comunidad
conyugal y menos a su representado.

Que dicho inmueble le fue adjudicado a su representado en fecha 29 de enero de


2004, mediante documento elaborado por el Fondo Nacional de Desarrollo Urbano
(FONDUR) denominado “Certificado de Adjudicación/ Promesa de Venta”.

Que el documento de adjudicación de ninguna manera acredita que su representado


sea propietario del inmueble, por cuanto trata de un documento privado que tiene
efecto entre las partes que lo suscribieron y no ante terceros.

Que su representado no ha hecho pago alguno que conlleve a FONDUR a otorgar el


respectivo titulo de propiedad debidamente protocolizado ante el Registro
Inmobiliario correspondiente.

Que es por lo antes expuesto que se opone a la partición.

En su particular segundo manifestó:

En cuanto a las prestaciones sociales, rechazó, negó y contradijo que la cuota parte
que le corresponde a la demandante por concepto de prestaciones Sociales, deban
incluirse fidecomisos, bonos y cualquier otro porcentaje que pueda corresponderle.

Que la cuota parte que le corresponde a la demandante, es a razón de lo que su


representado acumuló desde el momento en que contrajeron matrimonio, hasta la
fecha en que se disolvió el vínculo conyugal, y no sobre beneficios que percibirá su
representado y demandado, en un futuro.

Que dichas prestaciones deben ser calculadas desde la fecha en que contrajeron
matrimonio (19 de noviembre de 1993) hasta la fecha en que se disolvió el mismo (28
de junio de 2006), fecha del ejecútese, en consecuencia estaríamos hablando de doce
(12) años y siete (7) meses de matrimonio, todo de conformidad con los artículos 151,
152 y 158 del Código Civil.

ALEGATOS DE LA RECONVENCIÓN OPUESTA POR EL APODERADO


JUDICIAL DEL DEMANDADO:

Que la ciudadana E.G.M.G., supra identificado y parte demandante en la presente


litis, desde la fecha que contrajo matrimonio con su representado, presta servicios
para el Ministerio de la Defensa, Comandancia General de la Aviación,
específicamente en el Servicio de Intendencia F.A.V., desempeñando el cargo de
asistente de oficina.

Que al omitir la actora, éste hecho, ha pretendido evadir la liquidación y partición de


bienes de la comunidad conyugal, donde su representado tiene derecho al cincuenta
por ciento (50%) de las prestaciones sociales y demás derechos laborales por ser parte
de la comunidad conyugal, esto de conformidad con los ordinales 2 y 3 del articulo
156 del Código Civil.

Que dichas prestaciones deben ser calculadas por el tiempo que duró el vínculo
conyugal.

Que por todo lo expuesto, reconviene a la parte actora al pago del cincuenta por
ciento (50%) de sus prestaciones sociales y demás derechos laborales a favor de su
representado, por haberlas adquiridos durante el matrimonio, de conformidad con los
ordinales 2 y 3 del articulo 156, en concordancia con los artículos 173, 174, 760 y
siguientes del Código Civil y 777 y siguientes del Código de Procedimiento Civil.

Contestación a la reconvención:

El apoderado judicial de la parte actora, manifestó lo siguiente:

Que la solicitud o demanda de reconvención propuesta por la parte demandada, por


cuanto nada tiene que ver con la partición solicitada, y nada tiene que ver con la
demanda principal de partición, solicitó que la misma se deje sin efecto.

III

DE LAS PRUEBAS

DE LAS PRUEBAS CONSIGNADAS POR LA ACTORA Y RECONVENIDA EN


LA PRESENTE LITIS.

 Poder especial otorgado por la ciudadana EGILDA GRACIELA GUERRERO,


venezolana, mayor de edad, titular de la cedula de identidad N° V-7.207.764, al
abogado J.H.C.M., inscrito en el Inpreabogado bajo el No. 54.834, por ante la Notaria
Pública Tercera de Maracay, en fecha 17 de febrero de 2006, quedando inserto bajo el
No. 66, Tomo 27, el cual al no haber sido objeto de tacha o impugnación alguna este
Tribunal le otorga pleno valor probatorio, de conformidad con lo establecido en los
artículos 1.357 y 1.359 del Código Civil en concordancia con el 429 del Código de
Procedimiento Civil, desprendiendo del mismo la facultad que tiene para actuar en el
presente juicio la representación judicial de la parte actora. Así se decide.

 Inspección Judicial evacuada por ante el Juzgado Segundo de los Municipios


Girardot y M.B.I. del Estado Aragua, en el expediente signado con la solicitud No.
252-06, de fecha 26 de julio de 2006, sobre inmueble ubicado en la Urbanización
MONTAÑA FRESCA, avenida Los Laureles, No. 265 de la Jurisdicción del
Municipio Girardot del Estado Aragua, debidamente solicitado por la ciudadana
E.G.M.G., antes identificada, del mencionado expediente se desprende los
documentos siguientes:

- El primero de ellos, copia simple de la Sentencia de Divorcio de los ciudadanos


E.G.M.G. y E.A.S.B., supra identificados, dictada por el Tribunal de Protección del
Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Aragua, Juez
Unipersonal No. 1, en el expediente Signado con el No. 29.221, de fecha 24 de mayo
de 2006, el cual al no haber sido objeto de tacha o impugnación alguna este Tribunal
le otorga pleno valor probatorio, de conformidad con lo establecido en los artículos
1.357 y 1.359 del Código Civil en concordancia con el 429 del Código de
Procedimiento Civil. Así se declara.
- Los segundo documentos que se desprenden del expediente en cuestión son; dos
recibos expedidos a favor de E.A.S.B., el primero de ellos por el FONDO
NACIONAL DE DESARROLLO URBANO (FONDUR) por la cantidad de DOS
MILLONES QUINIENTOS CINCUENTA MIL BOLÍVARES (2.550.000,00), por
concepto de cancelación de cuota inicial por una vivienda en el Conjunto Residencial
Montaña Fresca, Maracay, E.. Aragua, identificado por el No. L 265, expedido en
fecha 8 de junio de 2001, y el segundo de ellos por HEMEICA, C.A., por la cantidad
de QUINIENTOS NOVENTA Y CINCO MIL BOLÍVARES (Bs. 595.000,00), por
concepto de honorarios administrativos por coordinación y tramitación de documento
de compra venta de la vivienda ubicada en el Conjunto Residencial Montaña Fresca,
Maracay, E.. Aragua, identificado por el No. L 265, expedido en fecha 8 de junio de
2001. Este Tribunal observa que el contenido de las presentes instrumentales, quedó
ratificado mediante prueba de informe remitida por el FONDO NACIONAL DE
DESARROLLO URBANO, mediante comunicado No. CJ-2008-83 0654 de fecha 12
de mayo de 2008, a este Tribunal, contentiva del documento de pre-compra venta
suscrito entre dicha entidad y el ciudadano E.S., en la cual, en su particular tercero se
evidencia que el costo del inmueble fue por la cantidad de DIECISIETE MILLONES
DE BOLÍVARES (Bs. 17.000.000,00), que el comprador se obligó a pagar, en el cual
se desprende que debía dar una inicial de DOS MILLONES QUINIENTOS
CINCUENTA MIL BOLÍVARES (2.550.000,00) y por concepto de gastos de
tramitación, documentación y gastos para cubrir la redacción y registro de los
documentos de parcelamiento y dominio al momento de la firma del documento de
pre-Venta, el 3,5% del precio de la venta antes mencionado. En consecuencia, se le
otorga pleno valor probatorio de conformidad con lo establecido en el artículo 433 del
Código de Procedimiento Civil. Así se declara.

Ahora bien, con respecto a la inspección en cuestión, dicho Tribunal dejó constancia
que el ciudadano E.A.S.B., se dio por notificado de dicha inspección y de los
particulares señalados por la solicitante en los siguientes términos: particular

PRIMERO
quienes habitan el inmueble, el notificado expresó que el inmueble lo ocupa su madre
y su hermana que se encuentra actualmente en San Antonio, Estado Tachira;
particular SEGUNDO: que se dejara constancia de cualquier documento, el notificado
expresó que tiene una copia de documentación de FONDUR; particular TERCERO:
que se dejara constancia sobre los bienes muebles que existen en dicho bien objeto de
la inspección, el Tribunal manifestó que existen bienes muebles; particular
CUARTO: que se dejara constancia del carácter que tiene el ocupante que se
encuentre en el bien objeto de la inspección, y que se exhibiera documentación sobre
ello, el notificado expresó que posee una copia de documentación de FONDUR del
año 2001; particular QUINTO: el uso para el cual esta siendo destinado el inmueble,
el notificado manifestó que para uso familiar; particular SEXTO: no se hizo uso de la
reserva. Este Tribunal observa que la presente inspección no ha sido objeto de tacha o
impugnación, y en consecuencia a ello, le otorga plena eficacia probatoria de
conformidad con lo establecido en los artículos 472 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil. Así se expresamente se declara y decide.

 Certificado de “Adjudicación de Vivienda” de fecha 14 de febrero de 2008,


expedido por la oficina de vivienda del Fondo Nacional de Desarrollo Urbano del
Ministerio para la Vivienda y Habita, bajo certificado No. 050030070096, del cual se
evidencia, como adjudicatario ciudadano E.A.S.B., titular de la cedula de identidad
No. V-1.585.881, información de la vivienda adjudicada, desarrollo habitacional
“Plaza Residencial Montaña Fresca”, Avenida Los Laureles, Casa No. 265-L, M.G.,
Estado Aragua. Este Tribunal le otorga pleno valor probatorio a la presente
instrumental, concatenada con la prueba de informe emanada del FONDO
NACIONAL DE DESARROLLO URBANO, mediante memorando No. CJ-2008-83
0654 de fecha 12 de mayo de 2008, contentiva de documento de pre-compra venta
suscrito entre dicha entidad y el ciudadano EDGAR SAYAZO, en fecha 8 de junio de
2001. Así se declara.

 Acuse de recibo remitido por el departamento de Bienestar y Seguridad Social del


INSTITUTO DE PREVISIÓN SOCIAL DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL
de Maracay, de fecha 8 de noviembre de 2010, mediante el cual manifiestan que por
esa entidad se encuentra retenida la cantidad de VEINTICUATRO MIL
CUATROCIENTOS TREINTA Y DOS BOLÍVARES CON DIECIOCHO
CÉNTIMOS (Bs. 24.432,18), correspondientes al 50%, de la asignación de
antigüedad por el lapso que duro la unión matrimonial, en espera que los ciudadanos
E.G.M.G. y C.. E.S.B., antes identificados, liquiden la comunidad conyugal. Este
Tribunal le otorga pleno valor probatorio a la presente instrumental de conformidad
con lo establecido en los artículos 472 y siguientes del Código de Procedimiento
Civil. Así se declara.

DE LAS PRUEBAS CONSIGNADAS POR LA PARTE DEMANDADA Y


RECONVINIENTE EN LA PRESENTE LITIS.

 Poder especial otorgado por el ciudadano E.A.S.B., venezolano, mayor de edad,


titular de la cedula de identidad N° V-1.585.881, a los abogados W.R.R. y HEISA
CORREA PADILLA, inscritos en el Inpreabogado bajo los Nos. 99.518 y 101.008,
respectivamente, por ante la Notaria Pública Cuarta de Maracay, en fecha 2 de abril
de 2007, quedando inserto bajo el No. 45, Tomo 59, el cual al no haber sido objeto de
tacha o impugnación alguna este Tribunal le otorga pleno valor probatorio, de
conformidad con lo establecido en los artículos 1.357 y 1.359 del Código Civil en
concordancia con el 429 del Código de Procedimiento Civil, desprendiendo del
mismo la facultad que tiene para actuar en el presente juicio la representación judicial
de la parte demandada. Así se decide.

 Acta de Entrega, suscrita por el FONDO NACIONAL DE DESARROLLO


URBANO, en fecha 29 de enero de 2004, al beneficiario ciudadano E.A.S.B.,
venezolano, mayor de edad, titular de la cedula de identidad No. V-1.585.881, de la
adjudicación de una vivienda identificada signada con el No. L-0265, T.B., en el
Sector “Los Laureles” de la Urbanización “Montaña Fresca”, del Estado Aragua,
construida por el ende ejecutor de vivienda y cedente por medio del acta en cuestión,
del cual se evidencia una serie de cláusulas que se obligó a cumplir el adjudicatario,
tomando en cuenta las mas relevantes para el caso de marras como lo son;
“…cláusula sexta: el FONDO NACIONAL DE DESARROLLO URBANO
(FONDUR) por medio de la presente ACTA DE ENTREGA, dará en
adjudicación/Promesa Compra Venta, un inmueble identificado en el encabezado del
presente documento y del cual se adjunta plano de la parcela y sus bienhechurias, los
cuales deberán ser respetados por EL ADJUDICATARIO…” y su “…cláusula
décima: la vivienda otorgada es absolutamente intransferible y su trasgresión se
considerará especial causal de Resolución del Contrato de Promesa de Venta y/o la
Revocatoria del CERTIFICADO DE ADJUDICACIÓN. Asimismo, le queda
prohibido al adjudicatario subarrendar total o parcialmente, ni dar el inmueble en
préstamo aunque sea gratuito, ni permitir su ocupación por terceros en ningún
carácter…”. Este Tribunal observa que la presente instrumental no ha sido objeto de
tacha y de impugnación, y a su vez, que es emanada de un ende público que no es
parte en la presente litis, sin embargo, se evidencia de las actas del presente
expediente, prueba de informe emanada del FONDO NACIONAL DE
DESARROLLO URBANO, mediante comunicado No. CJ-2008-83 0654 de fecha 12
de mayo de 2008, contentiva de documento de pre-compra venta suscrito entre dicha
entidad y el ciudadano EDGAR SAYAZO, en fecha 8 de junio de 2001, sobre el
inmueble objeto de la acta de entrega en cuestión, en consecuencia de ello, se le
otorga pleno valor probatorio a la presente instrumental de conformidad con el
articulo 431 del Código de Procedimiento Civil, por haber sido ratificado su
contenido a través de prueba de informe de conformidad con el articulo 433 eiusdem.
Así se declara.
 Informe remitido por el departamento de Bienestar y Seguridad Social del
INSTITUTO DE PREVISIÓN SOCIAL DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL
de Maracay, de fecha 25 de marzo de 2008, mediante el cual manifiestan que la
ciudadana E.G.M.G., no aparece registrada como militar activo o retirado de la fuerza
armada. Este Tribunal le otorga pleno valor probatorio a la presente instrumental de
conformidad con lo establecido en los artículos 472 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil. Así se declara.

 Informe remitido por el FONDO NACIONAL DE DESARROLLO URBANO,


mediante comunicado No. CJ-2008-83 0654 de fecha 12 de mayo de 2008, contentivo
de documento de pre-compra venta suscrito entre dicha entidad y el ciudadano
EDGAR SAYAZO, en fecha 8 de junio de 2001, sobre un bien inmueble signado con
el No. L-0265, T.B., en el Sector “Los Laureles” de la Urbanización “Montaña
Fresca”, del Estado Aragua, del cual se evidencia una serie de cláusulas que se obligó
a cumplir el adjudicatario, tomando en cuenta las mas relevantes para el caso de
marras, como lo son: “…TERCERA: el precio por el cual EL PROMITENTE
VENDEDOR se compromete a vender y LOS PROMITENTES COMPRADORES se
comprometen a comprar el inmueble anteriormente descrito es la cantidad de
DIECISIETE MILLONES DE BOLÍVARES (Bs. 17.000.000,00) que los
PROMITENTES COMPRADORES se obligan a pagar a EL PROMITENTE
VENDEDOR de la siguiente manera: la inicial de DOS MILLONES QUINIENTOS
CINCUENTA MIL BOLÍVARES (Bs. 2.550.000,00) al momento de la firma del
documento de Pre-venta. El 3.5% del precio de venta mencionado en la Cláusula
Octava de este contrato correspondiente a los gastos de tramitación, documentación y
gastos para cubrir la redacción y registro de los documentos de parcelamiento y
dominio al momento de la firma del documento de Pre-venta. El 1% correspondiente
al Fondo de Garantía y Reserva se aplicará al saldo para ser financiado en el largo
plazo para llegar a la cantidad de CATORCE MILLONES SETENTA Y CINCO
MIL CUATROCIENTOS SESENTA Y CUATRO BOLÍVARES CON 57/100 CTS
(Bs. 175.464,57) que comprenden amortización a capital e intereses calculados a la
tasa de interés anual del 12%. La primera de ellas pagadera a los treinta días de la
firma de este documento. EL PROMITENTE COMPRADOR está obligado a
efectuar todos los pagos en cheque de gerencia a nombre de FONDO NACIONAL
DE DESARROLLO URBANO (FONDUR).(…) SÉPTIMA: EL PROMITENTE
COMPRADOR, en virtud de la naturaleza social de este contrato, se obliga a no
enajenar, ceder, ni arrendar el inmueble mencionado en la cláusula primera de este
documento, durante los cinco (5) años siguientes al pago de la última cuota del precio
de venta, por lo que cualquier operación realizada en contradicción de esta cláusula se
reputara nula, esta misma condición se reflejará en el documento de compraventa
definitivo. Este Tribunal le otorga pleno valor probatorio a la presente instrumental de
conformidad con lo establecido en los artículos 472 y siguientes del Código de
Procedimiento Civil. Así se declara.

IV

MOTIVACIONES PARA DECIDIR

DEMANDA Y RECONVENCIÓN

Dispone el artículo 777 del Código de Procedimiento Civil, lo siguiente:

La demanda de partición o división de bienes comunes se promoverá por los trámites


del procedimiento ordinario y en ella se expresará especialmente el titulo que origina
la comunidad, los nombres de los condóminos y la proporción en que deben dividirse
los bienes.

Si de los recaudos presentados el Juez deduce la existencia de otro y otros


condóminos, ordenará de oficio su citación

.
De la redacción del artículo citado se evidencia que en el juicio de partición, pueden
presentarse dos situaciones diferentes a saber: 1. Que en el acto de la contestación de
la demanda no se haga oposición a los términos en que se planteó la partición en el
correspondiente libelo. En tal supuesto, no existe controversia y el juez declarará
procedente la partición y ordenará a las partes nombrar un partidor y 2. Que los
interesados realicen oposición a la partición, la cual puede ser total o parcial, en tal
supuesto el proceso se tramitará por el procedimiento ordinario, hasta que se dicte la
decisión declarando con lugar o no la partición. Ese ha sido el criterio imperante del
Tribunal Supremo de Justicia y así lo ha dejado sentado en su reiterada
jurisprudencia, entre otras, sentencia de fecha 2 de junio de 1999, en el juicio seguido
por A.C., en la cual estableció:

...El juicio de partición está conformado por dos fases o etapas: una, que se tramita
por el procedimiento del juicio ordinario y, la otra, que es la partición propiamente
dicha.

Aun cuando este proceso debe promoverse por los trámites del juicio ordinario, sin
embargo, esta vía sólo se abre si hubiere oposición a la partición o se discutiere el
carácter o la cuota de los interesados. En el caso de que se contradiga la demanda, el
proceso continuará su curso hasta dictarse sentencia definitiva y en el supuesto de que
ello no ocurriera comenzarán a practicarse las actuaciones necesarias para el
nombramiento del partidor, fase esta en la que se ejecutarán las diligencias de
determinación, valoración y distribución de los bienes.

Así lo ha interpretado esta Corte en su reiterada doctrina, entre la que se cita la


contenida en el fallo del 2 de octubre de 1997 (A.S.P. c/ Claudencia Ggelis
Camacho), en la que se dejó sentado los siguiente:...

En efecto, el procedimiento de partición se desarrolla en dos etapas claramente


diferenciadas. Una que se tramita por la vía del juicio ordinario y que sólo se abre si
en la oportunidad de contestar la demanda hubiere oposición a la partición o se
discutiere el carácter o la cuota de los interesados; y la otra, que es la partición
propiamente dicha, en la que se designa un partidor y se ejecutan las diligencias
propiamente dichas, en la que se designa un partidor y se ejecutan las diligencias de
determinación, valoración y distribución de los bienes del caso...”

Aunado a ello, tenemos que en el contenido del artículo 780 del Código Civil, se
expresa:

La contradicción relativa al dominio común respecto de alguno o alguno de los bienes


se sustanciará por los trámites del procedimiento ordinario en cuaderno separado, sin
impedir la división de los demás bienes cuyo condominio no sea contradicho y a éste
último efecto se emplazará a las partes para el nombramiento del partidor.

Si no hubiere discusión sobre el carácter o cuota de los interesados, se sustanciará y


decidirá por los trámites del procedimiento ordinario y resuelto el juicio que
embarace la partición se emplazará a las partes para el nombramiento del partidor

De las normas anteriormente transcritas se puede determinar que en el juicio de


partición pueden presentarse dos etapas totalmente distintas las cuales se encaminarán
según lo que se plantee en el acto de la contestación a la demanda, es tal sentido si en
la contestación no se hace oposición, a los términos en que se planteó la partición, no
existe entonces controversia y el juez deberá declarará con lugar la partición, en
consecuencia ordenará a las partes nombrar el partidor; y en caso contrario, que los
interesados realicen oposición a la partición, el proceso se sustanciará y decidirá
siguiendo los trámites del juicio ordinario hasta que se dicte el fallo que embarace la
partición, tal y como lo establece el artículo 780 del Código de Procedimiento Civil, y
una vez decidido se emplazará o no a las partes para que procedan al nombramiento
del partidor; en esta etapa contradictoria no establece la norma nada en relación a la
interposición de las cuestiones previas; y por otra parte la etapa ejecutiva, que se
inicia una vez se declare que hay lugar a la partición, y se procede al nombramiento
del partidor.

En el presente caso, se desprende que estamos en presencia de un juicio que por


partición de la comunidad conyugal intenta la ciudadana E.G.M., contra el ciudadano
E.A.S.B., por cuanto el demandado se niega a partir los bienes y gananciales
adquiridos dentro del matrimonio de común acuerdo, asimismo, observa este Tribunal
que el vinculo conyugal que unía a los ciudadanos en cuestión, fue desde el 19 de
noviembre de 1993, hasta el 24 de mayo de 2006, tal y como se evidencia de
sentencia de divorcio proferida por el Juzgado de Protección del Niño y del
Adolescente de la Circunscripción Judicial del Estado Aragua.

Los gananciales y bienes que la actora alegó que pertenecían a la comunidad


conyugal, corresponden a los beneficios que generaron de los frutos devengados por
la profesión como militar del demandado, en un cincuenta por ciento (50%), donde
deben incluirse prestaciones sociales por antigüedad, fidecomiso, bonos y cualquier
otro porcentaje que pueda incluirse, y un inmueble ubicado en la Urbanización
MONTAÑA FRESCA, avenida Los Laureles, No. 265 de la Jurisdicción del
Municipio Girardot del Estado Aragua.

De igual forma, se evidencia de las actas la contestación de la demanda por parte de


la representación judicial del ciudadano E.A.S.B., en su condición de demandado,
mediante el cual negó que el inmueble supra identificado, pertenezca a la comunidad
conyugal y menos a su representado, en virtud de que dicho inmueble le fue
adjudicado a su representado en fecha 29 de enero de 2004, mediante documento
elaborado por el Fondo Nacional de Desarrollo Urbano (FONDUR) denominado
“Certificado de Adjudicación/ Promesa de Venta”, y la mencionada entidad de
ninguna manera le acredita la propiedad del mencionado inmueble, asimismo,
expresó que trataba de un documento privado el cual solo tiene efectos entre las
partes que lo suscribieron y no ante terceros.

Asimismo, en cuanto a las prestaciones sociales generadas por su representado, negó


que la cuota parte que le corresponde a la demandante por concepto de prestaciones
sociales, deban incluirse fidecomiso, bonos y cualquier otros porcentajes que pueda
corresponderle, ya que, lo que le corresponde son las prestaciones sociales, a razón
del trabajo que su representado acumulo durante el tiempo que duró el vinculo
conyugal.

Por otra parte, la representación judicial de la parte demandada pasó a reconvenir a la


parte actora ciudadana E.G.M., por cuanto la misma, omitió mencionar en su escrito
libelar, que desde que contrajo matrimonio con su representado, presta servicios para
el Ministerio de la Defensa, Comandancia General de la Aviación, específicamente en
el Servicio de Intendencia F.A.V, desempeñando el cargo de asistente de oficina,
correspondiéndole al ciudadano E.A.S.B., el derecho al cincuenta por ciento (50%) de
las prestaciones sociales y demás derechos laborales por ser parte de la comunidad
conyugal.

En este sentido, se observa que la representación judicial de la parte actora alegó que
la reconvención propuesta por el demandado, debía dejarse sin efecto, por cuanto la
misma nada tenía que ver con el fondo de la presente litis.

Ahora bien, a los fines de resolver la oposición planteada se hace necesario hacer
unas breves consideraciones al respecto:

En el régimen legal supletorio venezolano de comunidad de gananciales, cada


cónyuge conserva la exclusiva titularidad sobre los bienes y derechos que ya le
pertenecían antes de la celebración del matrimonio, tanto de los muebles como de los
inmuebles, independientemente de que hubieran sido adquiridos por actos onerosos o
gratuitos. Es así, como nuestro Código Civil, en su artículo 151, expresa: “Son bienes
propios de los cónyuges los que pertenecen al marido y a la mujer al tiempo de
contraer matrimonio”.

Dicho artículo tiene su origen en el Código Civil Italiano, y fue incorporado por
primera vez a nuestro Código Civil de 1862, conservándose también, en las reformas
realizadas al citado Código en los años: 1867; 1873; 1880; 1896; 1904; 1916; 1922 y
1942. Asumiendo pues, el legislador en este sentido, que el patrimonio de cada
cónyuge está formado por la totalidad de los bienes de que es dueño al tiempo de
celebrar el matrimonio. Pero, sino consta a los autos, la anterior procedencia de los
bienes al matrimonio o su adquisición durante éste por donación, herencia o legado,
éstos pertenecen de por mitad a los esposos en el concepto de bienes de la comunidad
de gananciales.

En este orden de ideas, el autor E.C.B., en su obra Código Civil Venezolano


comentado y concordado, año 2002, páginas 137 y 138, en relación con la comunidad
de bienes, expresa:

Para E., es la ‘sociedad que por disposición expresa de la Ley, existe entre marido y
mujer desde el momento de la celebración del matrimonio hasta su disolución, en
virtud del cual se hacen comunes de ambos los bienes gananciales, de modo que
después se partan por mitad entre ellos o sus herederos, aunque el uno hubiese traído
más capital que el otro’.

Esta definición ha sido criticada porque viene a equiparar la sociedad conyugal con la
sociedad de gananciales, y si bien es cierto que están íntimamente relacionadas al
punto que de no existir sociedad conyugal no existiría sociedad de gananciales, se
diferencian lógicamente en que la sociedad de gananciales sólo regula el aspecto
económico o patrimonial de la sociedad conyugal, mientras que esta comprende
también las relaciones personales.

‘La comunidad conyugal es una sociedad universal de ganancias’, éste es el concepto


de nuestro legislador, puesto que el Código Civil en su Art. 1650 al prohibir
expresamente toda sociedad a título universal exceptúa de este prohibición de la
sociedad de ganancias entre cónyuges. La comunidad de bienes o comunidad
conyugal es régimen supletorio de la voluntad de los contrayentes, por disposición
del Art. 148.

Régimen de Gananciales. Indicamos que entre los ‘efectos del matrimonio’ está
también su régimen patrimonial, o sea el conjunto de normas referentes al patrimonio
de cada cónyuge, anterior a la celebración del matrimonio; el destino de los bienes
adquiridos durante el matrimonio o los adquiridos en ese mismo periodo por uno solo
de los esposos; con cuales bienes se han de solventar las cargas del matrimonio y el
destino de dichos bienes, una vez disuelta la sociedad conyugal.

En doctrina se han planteado diferentes sistemas y el adoptado por nuestra ley se


llama régimen de gananciales o comunidad de gananciales, o sea que por la
celebración del matrimonio se constituye entre marido y mujer una sociedad en que
puede haber bienes propios de cada cónyuge y bienes comunes. Ninguno de los
cónyuges puede renunciar a esta sociedad ni a sus efectos.

Los esposos no pueden convenir un régimen distinto al fijado por la ley, por ser éste
de orden público…

En consecuencia, es forzoso para esta Sentenciadora acoger, que en el sistema de


comunidad de gananciales, existen bienes propios de cada uno de los cónyuges y
bienes comunes de ambos. En general son bienes propios de los cónyuges, los que
tenga para el momento del matrimonio y los que adquieran a título gratuito cada uno
de ellos durante el mismo, mientras que son considerados bienes comunes, los que
adquieran a título oneroso durante el matrimonio y los obtenidos por razón de su
profesión, oficio o trabajo por cualesquiera de los cónyuges.

Así, tenemos que el artículo 152 del Código Civil, establece:

Se hacen propios del respectivo cónyuge los bienes adquiridos durante el matrimonio:

1º. Por permuta con otros bienes propios del cónyuge.

2º. Por derecho de retracto ejercido sobre los bienes propios por el respectivo
cónyuge y con dinero de su patrimonio.

3º. Por dación en pago hecha al respectivo cónyuge por obligaciones provenientes de
bienes propios.

4º. Los que adquiera durante el matrimonio o a título oneroso, cuando la causa de
adquisición ha precedido al casamiento.

5º. La indemnización por accidentes o por seguros de vida, de daños personales o de


enfermedades, deducidas las primas pagadas por la comunidad.

6º. Por compra hecha con dinero proveniente de la enajenación de otros bienes
propios del cónyuge adquirente.

7º. Por compra hecha con dinero propio del cónyuge adquirente, siempre que haga
constar la procedencia del dinero y que la adquisición la hace para sí.

En caso de fraude, quedan a salvo las acciones de los perjudicados para hacer declarar
Judicialmente a quién corresponde la propiedad adquirida.

Acerca de esta Comunidad Conyugal o Patrimonio Común la doctrina compilada en


la obra Código Civil de Venezuela, editada por la Universidad Central de Venezuela
(p.355; 1996), expresa:

En el régimen patrimonial matrimonial de la comunidad de gananciales, al lado de los


bienes propios o exclusivos del respectivo cónyuge adquiriente, existen otros que
pertenecen en común de por mitad a ambos esposos, independiente de cual de ellos
los haya habido. Son esos los bienes gananciales

“Se consideran comunes en principio y por regla general, todos los bienes que los
esposos adquieren conjunta o separadamente durante el matrimonio, por actos a titulo
oneroso…Existe como consecuencia del Matrimonio una comunidad de gananciales y
en virtud de esta, una presunción de existencia de ella sobre los bienes adquiridos por
los cónyuges a título oneroso, ya sea de forma conjunta o separadamente, al respecto
observamos que la citada obra precisa que (p.355):

A falta de toda convención rige la comunidad legal; los bienes adquiridos durante el
matrimonio se presumen que pertenecen a la sociedad conyugal y ésta es una
presunción legal de copropiedad. De modo, que si no consta la anterior procedencia
de los bienes al matrimonio o su adquisición durante éste, pro donación, herencia o
legado, éstos pertenecen de por mitad a los esposos en el concepto de bienes comunes
o gananciales (L.H., Tratado de Derecho de Familia, páginas 355 y 465)

Resulta forzoso concluir entonces, que si no se demuestra que los bienes adquiridos
durante el matrimonio son propios del respectivo cónyuge, por algunos de los
supuestos consagrados en el artículo 152 del Código Civil, debe prevalecer la
presunción contenida en el artículo 164 eiusdem y en consecuencia se deben
considerar como bienes de la comunidad conyugal.

En el caso que nos ocupa, en cuanto a las prestaciones sociales demandadas por la
actora, y reconocidas de manera parcial por el demandado, en virtud de que considera
que la cuota parte que le corresponde a la actora por concepto de prestaciones
sociales originadas del desempeño de su función como militar activo, durante el
tiempo que duró el vinculo conyugal, no deben incluírsele los beneficios como lo son
los fidecomisos, bonos y cualquier otros porcentajes; ahora bien, respecto a ello, esta
J. considera necesario aclarar, que el Código Civil vigente, no exceptúa que a la
comunidad conyugal de gananciales, no se deban incluir ningún tipo de beneficios
originados por el desempeño de una profesión u oficio, por cuanto, tanto las
prestaciones sociales como los beneficios originados, son parte de una sola masa
patrimonial, que pertenece de manera conjunta a la comunidad conyugal de
gananciales, y en razón de ello, las prestaciones sociales por concepto de los servicios
que prestó como militar activo el ciudadano E.A.S.B., le corresponde en cincuenta
por ciento (50%), es decir, por mitad, a la ciudadana E.G.M.G.. Así expresamente se
decide

Por otro lado, en cuanto a la reconvención intentada por el apoderado demandado, la


cual consiste en que las prestaciones sociales por los servicios que presto la actora,
para el Ministerio de la Defensa, Comandancia General de la Aviación,
específicamente en el Servicio de Intendencia F.A.V, desempeñando el cargo de
asistente de oficina, durante el tiempo que duró el vinculo conyugal, le corresponden
en cincuenta por ciento (50%) al demandado reconviniente, y desvirtuada como fue la
misma por la actora reconvenida, por cuanto alegó que nada tiene que ver con el
presente juicio, en razón a ello, encuentra menester esta Sentenciadora hacer las
siguientes consideraciones:

Con respecto a la reconvención, cabe destacar que es una nueva demanda que debe
plantearse como si se tratara de una demanda autónoma que debe cumplir con todos
los requisitos del libelo que señala el artículo 340 del Código de procedimiento Civil,
pues la naturaleza de la reconvención es ajena a la noción de defensa o excepción con
el juicio principal, pero ésta debe proponerse en la oportunidad de dar contestación a
la demanda de conformidad con lo dispuesto en el artículo 361 del mismo Código, el
cual expresamente prevé: “…Si el demandado quisiere proponer la reconvención o
mutua petición o llamar a un tercero a la causa, deberá hacerlo en la misma
contestación”.

En este sentido, por ser una nueva demanda autónoma a la principal, que llena los
requisitos exigidos por la ley, la cual fue propuesta por el demandado reconviniente,
la misma debe ser resuelta y no desechada tal y como lo considera la actora
reconvenido. Así se decide.

En este mismo orden de ideas, en cuanto a las prestaciones sociales interpuesta por el
demandado reconviniente, con respecto al Servicio que prestó la ciudadana
E.G.M.G., en el Ministerio de la Defensa, Comandancia General de la Aviación, del
Servicio de Intendencia F.A.V., desempeñando el cargo de Asistente de Oficina por
el tiempo que duró el vinculo conyugal, se evidencia de autos, específicamente de la
comunicación emanada del Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada
Nacional de fecha 25 de marzo de 2008, que la ciudadana en cuestión no aparecía
registrada como funcionaria adscrita a dicha institución, y por cuanto el demandado
reconviniente, no insistió en probar de forma idónea su pretensión, es por lo que
resulta forzoso para esta S. declarar sin lugar la reconvención propuesta por la parte
demandada reconviniente ciudadano E.A.S.B.. Así expresamente se decide.

Ahora bien, con respecto al inmueble ubicado en la Urbanización MONTAÑA


FRESCA, Avenida Los Laureles, No. 265 de la Jurisdicción del Municipio Girardot
del Estado Aragua, el cual ha sido opuesto por la actora para que sea incluido dentro
de los bienes pertenecientes a la comunidad conyugal y rechazado por el demandado,
por cuanto ha sido adjudicado en fecha 29 de enero de 2004, mediante documento
elaborado por el Fondo Nacional de Desarrollo Urbano (FONDUR) denominado
“Cerificado de Adjudicación/Promesa de Venta”, en virtud de que no se le acredita la
propiedad si no que se trata de un documento privado que tiene efecto entre las partes
y no ante terceros, ello no es suficiente para desvirtuar que se trata de un bien de la
comunidad, tal y como lo prevé el artículo 164 del Código Civil, que dispone: “Se
presume que pertenecen a la comunidad todos los bienes existentes mientras no se
pruebe que son propios de alguno de los cónyuges”.

Por su parte el artículo 1.397 del Código Civil, establece:

La presunción legal dispensa de toda prueba a quien la tiene a su favor.

La Sala de Casación Civil del Tribunal Supremo de Justicia en Sentencia Nº 1.278 de


fecha 29 de octubre de 2004 dejó sentado el siguiente criterio respecto a los
regímenes de bienes matrimoniales, a saber:

El matrimonio hace surgir entre los cónyuges dos distintos regímenes de bienes: 1.-
Los bienes propios de cada cónyuge, constituido por aquellos haberes que hayan
adquirido antes de celebrarse el matrimonio, los que adquieran posteriormente a título
gratuito, por donación (salvo que ella se haya realizado con ocasión del matrimonio),
herencia, legado y los que adquieran a título oneroso con dinero propio de cada uno
de ellos. ( en este caso es menester que tal situación se haga constar); 2.- Bienes de la
comunidad conyugal, que van a estar representados por todos los que se adquieran
durante la existencia del vínculo matrimonial, salvo pacto en contrario.

En consecuencia todos los bienes que se obtengan estando casadas dos personas se
presume, salvo pacto en contrario que pasan a formar parte del caudal común…

Aun más, el ordinal 1º del artículo 165 del Código Civil, dispone: “Son de cargo de la
comunidad: 1°. Todas las deudas y obligaciones contraídas por cualquiera de los
cónyuges en los casos en que pueda obligar a la comunidad.”

Por su parte el artículo 168 del Código Civil, señala: “Cada uno de los cónyuges
podrá administrar por sí solo los bienes de la comunidad que hubiere adquirido con su
trabajo personal o por cualquier otro título legítimo; la legitimación en juicio, para los
actos relativos a la misma corresponderá al que los haya realizado. Se requerirá del
consentimiento de ambos para enajenar a título gratuito u oneroso o para gravar los
bienes gananciales, cuando se trata de inmuebles, derechos o bienes muebles
sometidos a régimen de publicidad, acciones, obligaciones y cuotas de compañías ,
fondos de comercio, así como aportes de dichos bienes a sociedades…”

Entonces, todo bien que adquiera uno de los cónyuges durante la vigencia de la
comunidad de gananciales, es un bien de la comunidad y si bien lo correcto era que la
parte demandada lo adquiriera conjuntamente con su esposa, pues no le era dable
señalar que fue un contrato privado suscrito entre su persona y el Fondo Nacional de
Desarrollo Urbano (FONDUR), que no tiene efectos contra terceros, considerando
esta Sentenciadora que la tercera en que hace mención es la parte actora, si bien es
cierto que en principio, es un contrato privado, de pre-venta, tal y como se desprende
de las actas, el cual no le transmite la propiedad directa al demandado, si no que le
otorga la adjudicación del inmueble y la posibilidad de disponer de él, es decir,
modificarlo, enajenarlo, entre otras cosas, después de pasado un tiempo prudencial de
cinco (5) años, tal y como lo establece el contrato de pre-venta suscrito en fecha 8 de
junio de 2001, sin embargo, la accionante no entra como tercero, por cuanto era un
bien adquirido dentro del matrimonio, y en virtud de ello, el adquiriente se encontraba
regido bajo el régimen de la comunidad conyugal, siendo esta figura una especie de
vinculo que no prevé la adquisición de bienes de manera separada por cada cónyuge,
es decir, el bien desde este punto de vista también fue adquirido por la actora del
presente juicio, y no como lo alegó el demandado, que es una tercera que ante el bien
en cuestión no le causa ningún efecto jurídico.
Asimismo, como se evidencia del documento traslativo de propiedad, la adquisición
de un bien incluso inmueble que acrecienta la comunidad es perfectamente válido,
aun más cuando se evidencia de contrato de pre-venta suscrito entre el ciudadano
E.S.B., y el Fondo Nacional de Desarrollo Urbano (FONDUR), suscrito en fecha 8 de
junio de 2001, que existe una confesión espontánea por parte del demandado, a razón
de que, de dicha prueba promovida por el mismo, se desprende un precio pactado
para la adquisición del inmueble objeto de la presente litis, el cual asciende a la
cantidad de DIECISIETE MILLONES DE BOLÍVARES (Bs. 17.000.000,00).

En este orden de ideas, se evidencia de autos que dicho contrato de pre-venta fue
perfeccionado, según con la cancelación de la cuota inicial pactada para la
adquisición del inmueble por parte del demandado, tal y como se evidencia de recibos
expedidos en fecha 8 de junio de 2001, por el Fondo Nacional de Desarrollo Urbano
(FONDUR), a favor del ciudadano E.A.S.B., el cual no fue desvirtuado por el mismo,
de igual forma, con la entrega material del bien inmueble, evidenciándose tal hecho,
con documento denominado como “acto de entrega” expedido por el Fondo Nacional
de Desarrollo Urbano, a favor del ciudadano E.A.S.B., en fecha 29 de enero de 2004,
haciendo claro tales hechos, que estamos en presencia de una venta en el sentido
estricto de la palabra, y que a su vez, no fue desvirtuado por el demandado de autos,
que el bien adquirido fue con peculio de la unión conyugal, o que era para su propio
beneficio, lo que conllevó a esta S. a sostener que no se trata de una donación,
herencia o legado, que en contrario al caso que nos ocupa son de carácter gratuito al
momento de su adquisición.

Cabe destacar que el Fondo Nacional de Desarrollo Urbano (FONDUR), es un ente


encargado para la facilitación de los particulares de adquirir viviendas por un precio
regulado, el cual, por ser impulsado por el Estado, el otorgamiento en principio no da
la propiedad directa del bien, si no que otorga la posesión legitima por un tiempo
determinado, generando la posibilidad que con posterioridad, otorgara la facultad de
enajenarlo con previa solicitud de permiso al ente trasmisor para ello.

En este sentido, debe esta J. establecer que es incongruente lo afirmado por la parte
demandada, pues a pesar que es un bien, adjudicado por un ente del Estado, para ser
propio, requiere de una liberalidad de un tercero a favor de uno de los cónyuges
(donación o legado) o que le pertenezca por la compra del bien con dinero propio del
cónyuge adquirente, condición que no se cumple pues no prevé la ley la posibilidad
de hacer una mixtura entre estos dos supuestos, excluyentes uno del otro, aun más
cuando a través de un medio probatorio promovido por la parte demandada se
desprende, que la adquisición se hizo por un precio determinado, mediante el cual
esta confesando que la adquisición del bien de marras no fue de forma gratuita, y
como bien se evidencia fue dentro de la comunidad conyugal.

Como quiera que existen elementos de juicio que demuestran que el inmueble fue
adquirido por el ciudadano E.A.S.B., titular de la cedula de identidad No. V-
1.585.881, estando casado, y no se hizo constar en el documento de compraventa la
procedencia del dinero y que la adquisición la hizo para sí, lo que hace procedente la
presunción de que el bien inmueble pertenece a la comunidad conyugal; lo que hace
deducir que las obligaciones derivadas de tal acto son a cargo de la comunidad
conyugal, conforme lo dispone el ordinal 1º del artículo 165 del Código Civil,
resultando forzoso para esta S. declarar que el bien inmueble ubicado en la
Urbanización “MONTAÑA FRESCA”, Avenida Los Laureles, No. 265 de la
Jurisdicción del Municipio Girardot del Estado Aragua, pertenece en un cincuenta por
ciento (50%) a la ciudadana E.G.M.G., titular de la cedula de identidad No. V-
7.207.764, dado que el bien inmueble sí pertenece a la comunidad conyugal existente
entre la ciudadana supra mencionada y el ciudadano E.A.S.B., antes identificado, y
así se decide.

Por todos los argumentos explanados este Tribunal debe forzosamente declarar con
lugar la demanda que por partición de la comunidad conyugal intenta la ciudadana
E.G.M.G., titular de la cedula de identidad No. V-7.207.764, contra el ciudadano
E.A.S.B., titular de la cedula de identidad No. V-1.585.881, y sin lugar la
reconvención propuesta por el ciudadano E.A.S.B., antes identificado, contra la
ciudadana E.G.M.G., también identificada. Así expresamente se declara y decide.

DECISIÓN

En fuerza de las consideraciones antes expuesto, este Juzgado Primero de Primera


Instancia en lo Civil y Mercantil de la Circunscripción Judicial del Estado Aragua,
administrando justicia emanada de los ciudadanos y ciudadanas, en nombre de la
República Bolivariana de Venezuela y por Autoridad de la Ley, DECLARA:
PRIMERO: CON LUGAR la partición de la comunidad conyugal intenta la
ciudadana E.G.M.G., titular de la cedula de identidad No. V-7.207.764, contra el
ciudadano E.A.S.B., titular de la cedula de identidad No. V-1.585.881.

SEGUNDO
SIN LUGAR la reconvención propuesta por el ciudadano E.A.S.B., antes
identificado, contra la ciudadana E.G.M.G., también identificada.

TERCERO
Se emplaza a las partes para el nombramiento del Partidor para el Décimo (10°) día
siguiente, conforme a lo establecido en el Artículo 778 del Código de Procedimiento
Civil.

CUARTO
De conformidad con lo establecido en el artículo 274 del Código de Procedimiento
Civil se condena en costas a la parte demandada, por resultar totalmente vencida.

P., regístrese y notifíquese.

Dada, sellada y firmada en la sala del despacho del JUZGADO PRIMERO DE


PRIMERA INSTANCIA EN LO CIVIL Y MERCANTIL DE LA
CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ARAGUA, en Maracay, a los 18
dias del mes de febrero 2011, año 200° de la Independencia y 151° de la Federación.

LA JUEZ PROVISORIA

LA SECRETARIA,

D.L.C.D.M.

En esta misma Fecha se Publicó la anterior decisión siendo la 9:30 a.m.-

LA SECRETARIA,

D.M.

Valora este documento:

Вам также может понравиться