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b.
c.
d.
b. 1313
c. 1212
d. 15
Se tiene una caja de caras rectangulares cuyo volumen es igual a 1000 cm 3.Si el largo es cuatro veces
el ancho y la altura es el doble del ancho, entonces, el área superficial de la caja en cm 2 es:
Seleccione una:
a. 800
b. 500
c. 1000
d. 700
4-Una persona que pesa 120kg, decide hacer una dieta. Esta persona
sabe que el 40% de su masa total, está conformada por grasa. Si
durante el primer mes de su dieta, esta persona pierde el 60% de
grasa y mantiene los otros índices iguales, entonces al finalizar el
primer mes ella pesa:
Seleccione una:
a. 91,2 kg
b. 100 kg
c. 89,6 kg
d. 96 k
Seleccione una:
a. 2πrh2πrh
b. 10πrh210πrh2
c. 10πr2h10πr2h
d. 7πr2+h
A: 20 T: 14
G: 15 A y T: 7
A y G: 5 G y T: 6
A, T y G: 2
Seleccione una:
a. 3
b. 2
c. 0
d. 1
es:
Seleccione una:
a. Diagrama D
b. Diagrama B
c. Diagrama A
d. Diagrama C
b. F=3C+1F=3C+1
c. F=4C−3F=4C−3
d. F=C+3
G: 15 A y T: 7
A y G: 5 G y T: 6
A, T y G: 2
El siguiente gráfico nos muestra la cantidad de niños por año que hay
en una escuela:
b. 1212
c. 3434
d. 14
b. 213213
c. 12861286
d. 113
Seleccione una:
a. 811811
b. 522522
c. 311311
d. 511
b. 2323
c. 2929
d. 12
Seleccione una:
a. 72
b. 144
c. 14
d. 60
Un reloj digital da la hora mostrando 4 dígitos. Por ejemplo cuando es
media noche el muestra 00:00 y cuando falta un minuto para la media
noche él muestra 23:59. El número de veces por día que la hora
mostrada está formada por 4 dígitos pares es:
Seleccione una:
a. 180
b. 120
c. 105
d. 60
Seleccione una:
a. 144
b. 24
c. 14
d. 18
Seleccione una:
a. Si una persona pasó por la guía 6, entonces, pasó por la guía 5
b. Si una persona no pasa por la guía 6, entonces, tiene que pasar por
la guía 5
c. Si una persona no pasó por la guía 6, entonces, no pasó por la guía
5
d. Si una persona pasó por la guía 5, entonces, pasó por la guía 6
Seleccione una:
a. 29
b. 92
c. 3
d. 27
c. 171 cm 2
d. 315 cm 2
José Saramago
De la siguiente frase escoge los antónimos de las palabras
subrayadas
El problema
Un anfiteatro era lo que le esperaba a nuestra relación. Cada vez que
sus reclamos llegaban una neuralgiamartillaba mis pensamientos, mi
calma. La cronología de nuestros actos ya alertaban una caída en la
manera de mirarnos. Solo un acto metafísico como el de los ejercicios
divinos podría acabar con mi antropocentrismo. Admito ser la razón
del conflicto, mi poligamia no encuentra lugar con sus moldes
mentales. Sin embargo, la nostalgia me apremia. Debo parar de ser
un cefalópodo que atrapa lo primero que ve y lo devora. Debo dejar de
usar mis ojos como si fuesen periscopios que se alertan con una falda.
Yo aquí soy el problema y debo resolverlo para no terminar siendo
el asocial que no quisiera ser por mis ansias desenfrenadas.
Anónimo
La nariz
Uribe, El culebrero
Allá el señor, allá la dama: acérquesen que para el día de hoy le tengo
la solución de sus problemas; yo soy varón de varones, soy culebrero
de fama; acá donde ustedes me ven, yo hice llorar al padre Marianito,
le inventé alas a Paloma Valencia, hice que María Fernanda perdiera
su Cabal, metí a Diego a Palacio y dije que María del Pilar había
Hurtado … Sí, señor: yo le hice un hoyo a Santoyo, yo hice fiera a
Noguera, yo hice pana a Salvador Arana, yo volví tuso a Mancuso... Y
acá vengo para arreglarles la vida y a defendermen de quienes me
ataquen.
Póngamele, pues, cuidado, señores y señoras: le tengo el remedio
para que le salga pelo a Obdulio, entendimiento a Pachito, mesura a
Fernando Londoño: ¿le parece que los guerrilleros no pueden ser
senadores a menos de que se llamen Everth? ¿Cree que no los
pueden encerrar en zonas de concentración, sino en suites del hotel
Tequendama? ¿Quiere que al Congreso vaya gente que alcance a
votar antes de que la metan presa, pero no el terrorista Far que nos
quiere imponer identidá de género?
Entonces arrimen; le tengo la receta para sobrevivir a 28 procesos,
para no comerle cuento a la justicia: ¿que le pusieron los procesitos
en lesa inmunidá?; ¿que lo pillaron hablando con unos malandros?;
¿que al señor le da pudor, que a la niña le da vergüenza? Nada de
eso, caballero: acá se actúa sin vergüenza. Repita por todo lado que
se instaló el castrochavismo y que lo están persiguiendo; diga a toda
hora que Lafar no entregó armas; haga que la gente salga a votar
berraca. Y si lo agarran en la mentira, se encomienda al santo Job.
Arrime, pues, por acá, tráigame al niño y lo alzo, le tengo el Croc que
no resbala, la peinilla que no necesita filo, el frac que sirve de babero:
acá en este canasto traigo la culebra que no necesita pagar, el pato
que puede llevar de candidato, la vaca sagrada para que la Ordóñez.
Yo soy el Macho de Machos: yo me gané el premio del Gran
Colombiano, el diploma de la Sergio Arboleda y la Asociación de
Machistas de Casanare me ofreció el Cojón de Oro… Allá la dama y el
caballero: ¿quieren hacersen famosos y que todo mundo los
reconozca? Hagan la receta de mi tía Dolly, que no le ‘dolí-a’ meterse
en líos con la mafia, y aliméntesen con la dieta de las frutas: sandías
para el doctor Macías; naranja para ofrecerle a Tanja… y lulo para que
le den las buenas noches.
Eh, ave María, allá el señor, allá la dama: en este canasto traigo el
remedio para acabar con Lafar, el brevaje para acabar con los pobres,
el jarabe de la chu: de la chumbimba, papá, y si así no caen, entonces
le aplica un poquito de nitrato: ni trato con ustedes y les doy es bala,
pues, papá… ¿Que esos muchachos estaban recogiendo café? ¡De
malas! ¿Que querían paz, pero no así? ¡Ya voy Toño! Yo también iba
a hacer procesito de paz, pero como dijo mi tía Fortuna: si acá no se
hace mi receta, no se hace ninguna.
A ver el caballero, a ver la dama: ¿quieren volverse ricos de un día
para el otro? ¿Sus hijos parecen entecos y lombricientos? ¡Tengo esta
receta mágica para que un lote cualquiera se les vuelva zona franca,
vea! Muy fácil: póngalos a trabajar, apláceles el gustico, agarre esta
escritura y esta chatarra, y listo Medellín, cabina ocho…
¿El suyo es esfuercito de caballito discapacitado? ¿La culebrita no le
queda viva ante las muchachas? ¿Se tomó un aguardientico y se le va
a salir el diablo? Le traigo el remedio para mejorar la salud: sume 50 y
50 y eso le da 100 y con eso haga una ley y quiebre al médico. ¿Dije
quebrar? ¡A quebrar se dijo, sáquese la mano del bolsillo, sea varón!
¿Quiere la paz con impunidá que ofrece el castrochavista Petro y no la
guerra con impunidá que ofrecemos nosotros?
Nada de eso, caballero: acá le traigo este menjurje prodigioso para
recobrar el rumbo, probado por alias la Mechuda en cada mecha, por
el Curita Velásquez en cada cura, vea: tiene un colmillo con sangre
seca del procurador, tres pelos de la senadora Valencia, gotas de
saliva de la doctora Cabal: lávese bien lavada la cabeza mientras
repite: “Manque me busque la corte / a mí me da mucha risa / con mi
pollo gano en junio / y ese proceso hago trizas”.
¿Le escuchan las conversaciones esos hijueputas? ¿En un mismo
mes le dicen que se sobrepasa con las damas, que le quitó un tornillo
al helicóptero del amigo al que le faltaba un ídem, que montó
bloquecito con el hermano y unos buenos muchachos? ¡Nanái cucas!;
frótese este aceite en las carnitas y huesitos, y repita diez veces: son
patrañas del castrochavismo Far; y lo verá que todo le resbala.
Véngasen, pues, acá, con este brujo; cómpremen mi receta: téngasen,
pues, del miedo, que ya viene el Cocomunismo y se los traga; y hagan
la fila ligerito que para todos hay: para el negociante prolijo, que es mi
hijo… Para mi nuevo man, que es Iván. Y allá en Palacio para la
persona impoluta, que es muy… tarde y me tengo que ir: adiós.
Daniel Samper Ospina
Tomado de: Columna de opinión revista
Semana. http://www.semana.com/opinion/articulo/alvaro-uribe-el-
culebrero-por-daniel-samper-ospina/558805
Seleccione una:
a. En el texto se utiliza en un sentido figurado
b. En el texto la expresión es utilizada como un atenuante para
nombrar directamente a ese personaje importante
c. Esta expresión se utiliza en un sentido literal
d. En el texto esta expresión se utiliza para nombrar justamente a un
personaje que no se puede criticar
-¡Diles que no me maten, Justino! Anda, vete a decirles eso. Que por
caridad. Así diles. Diles que lo hagan por caridad.
-No puedo. Hay allí un sargento que no quiere oír hablar nada de ti.
-Haz que te oiga. Date tus mañas y dile que para sustos ya ha estado
bueno. Dile que lo haga por caridad de Dios.
-No se trata de sustos. Parece que te van a matar de a de veras. Y yo
ya no quiero volver allá.
-Anda otra vez. Solamente otra vez, a ver qué consigues.
-No. No tengo ganas de eso, yo soy tu hijo. Y si voy mucho con ellos,
acabarán por saber quién soy y les dará por afusilarme a mí también.
Es mejor dejar las cosas de este tamaño.
-Anda, Justino. Diles que tengan tantita lástima de mí. Nomás eso
diles. Justino apretó los dientes y movió la cabeza diciendo:
-No. Y siguió sacudiendo la cabeza durante mucho rato. Justino se
levantó de la pila de piedras en que estaba sentado y caminó hasta la
puerta del corral. Luego se dio vuelta para decir:
-Voy, pues. Pero si de perdida me afusilan a mí también, ¿quién
cuidará de mi mujer y de los hijos?
-La Providencia, Justino. Ella se encargará de ellos. Ocúpate de ir allá
y ver qué cosas haces por mí. Eso es lo que urge.
Juan Rulfo
El término “de a de veras” significa:
Seleccione una:
a. De verdad.
b. Seguramente.
c. Cierto.
d. En la vida real.
-¡Diles que no me maten, Justino! Anda, vete a decirles eso. Que por
caridad. Así diles. Diles que lo hagan por caridad.
-No puedo. Hay allí un sargento que no quiere oír hablar nada de ti.
-Haz que te oiga. Date tus mañas y dile que para sustos ya ha estado
bueno. Dile que lo haga por caridad de Dios.
-No se trata de sustos. Parece que te van a matar de a de veras. Y yo
ya no quiero volver allá.
-Anda otra vez. Solamente otra vez, a ver qué consigues.
-No. No tengo ganas de eso, yo soy tu hijo. Y si voy mucho con ellos,
acabarán por saber quién soy y les dará por afusilarme a mí también.
Es mejor dejar las cosas de este tamaño.
-Anda, Justino. Diles que tengan tantita lástima de mí. Nomás eso
diles. Justino apretó los dientes y movió la cabeza diciendo:
-No. Y siguió sacudiendo la cabeza durante mucho rato. Justino se
levantó de la pila de piedras en que estaba sentado y caminó hasta la
puerta del corral. Luego se dio vuelta para decir:
-Voy, pues. Pero si de perdida me afusilan a mí también, ¿quién
cuidará de mi mujer y de los hijos?
-La Providencia, Justino. Ella se encargará de ellos. Ocúpate de ir allá
y ver qué cosas haces por mí. Eso es lo que urge.
Juan Rulfo
En 1914, don Jesús del Corral publicó su famoso cuento “Que pase el
aserrador”, el cual, desde entonces, figura en todas las antologías de la
literatura colombiana dado que reúne las calidades literarias del cuento
bien escrito: historia atrayente, narración concisa y eficaz, humor
dosificado, final inesperado.
La pequeña obra de don Jesús narra las aventuras de Simón Pérez,
desertor de uno de los ejércitos en contienda en la guerra civil de 1885
y quien, en compañía de un soldado boyacense, se internó en las selvas
del bajo Cauca en busca de una mina de oro que estaba montando el
Conde de Nadal a orillas del río Nus. A pesar de su total ignorancia en
el oficio, Simón se hizo pasar por experto aserrador y a punto de trovas,
cuentos, embustes y brebajes, obnubiló a la familia del Conde y pasó
dos años a cuerpo de rey en la mina, mientras por ingenuo y crédulo
"aquel pobre indio de Boyacá se murió de hambre... sin llegar a ser
aserrador".
Fuera de sus valores literarios, en el imaginario colectivo el cuento
representa el arquetipo del antioqueño: recursivo,
atrevido, chacharachero, audaz. Hay una palabra que agrupa con
precisión todas estas características: el avispado.
El pueblo antioqueño creó el culto al avispado. El avispado tiene
profunda confianza en sí mismo, por tanto, no requiere de preparación,
dado que su astucia natural le permite salir triunfante en todas las
situaciones. El avispado no prevé las situaciones, las resuelve en cada
momento gracias a su viveza. El avispado no hace empresas, hace
negocios. Para el avispado la mejor universidad es la calle y la vida. El
avispado no cree en el esfuerzo pues sabe cómo se la gana de ojo. El
avispado no conversa, sino que se come de cuento a la gente. El
avispado es cañero, fafarachero, lanza, espuelón, fregao y ventajoso,
tiene agallas y se lleva a todo el mundo por delante. El avispado se
ufana: "Yo no lo tumbé, el se cayó sólo". Para el avispado no hay mayor
triunfo que sacar ventaja en cada negocio.
Es muy simbólico el léxico utilizado por el habla popular para exaltar la
figura del avispado, por lo general asociado con la fauna predadora.
Para destacar a alguien nos referimos a él como una fiera, un tigre, un
águila, una culebra. Por el contrario, la víctima del avispado se asocia
con la flora: una papa, un aguacate, un arracacho, una torta. Claro que
no faltan los elementos faunísticos como el marrano y el burro o cierto
órgano masculino.
Fragmento tomado de: Mejía Arango, J. ”El culto al avispado”.
Columnista invitado, portal UdeA.
Progreso y retroceso
Inventaron un cristal que dejaba pasar las moscas. La mosca venía,
empujaba un poco con la cabeza y pop ya estaba del otro lado. Alegría
enormísima de la mosca. Todo lo arruinó un sabio húngaro al descubrir
que la mosca podía entrar pero no salir, o viceversa, a causa de no se
sabe qué macana en la flexibilidad de las fibras de este cristal que era
muy fibroso. En seguida inventaron el cazamoscas con un terrón de
azúcar adentro, y muchas moscas morían desesperadas. Así acabó
toda posible confraternidad con estos animales dignos de mejor suerte.
Julio Cortázar
En 1914, don Jesús del Corral publicó su famoso cuento “Que pase el
aserrador”, el cual, desde entonces, figura en todas las antologías de la
literatura colombiana dado que reúne las calidades literarias del cuento
bien escrito: historia atrayente, narración concisa y eficaz, humor
dosificado, final inesperado.
La pequeña obra de don Jesús narra las aventuras de Simón Pérez,
desertor de uno de los ejércitos en contienda en la guerra civil de 1885
y quien, en compañía de un soldado boyacense, se internó en las selvas
del bajo Cauca en busca de una mina de oro que estaba montando el
Conde de Nadal a orillas del río Nus. A pesar de su total ignorancia en
el oficio, Simón se hizo pasar por experto aserrador y a punto de trovas,
cuentos, embustes y brebajes, obnubiló a la familia del Conde y pasó
dos años a cuerpo de rey en la mina, mientras por ingenuo y crédulo
"aquel pobre indio de Boyacá se murió de hambre... sin llegar a ser
aserrador".
Fernando Vallejo
Del siguiente fragmento: “Ya para entonces Sabaneta había dejado de
ser un pueblo y se había convertido en un barrio más de Medellín, la
ciudad la había alcanzado, se la había tragado; y Colombia, entre
tanto, se nos había ido de las manos. Eramos, y de lejos, el país más
criminal de la tierra, y Medellín la capital del odio” se puede inferir que:
Seleccione una:
a. Sabaneta no hacía parte de la capital del odio porque era un pueblo
alejado de Medellín
b. Sabaneta hacia parte de la capital del odio porque se había
convertido en un barrio más de Medellín
c. Sabaneta hacía parte de Colombia por lo tanto era la más criminal
del mundo
d. Sabaneta era el país más criminal de la tierra
Destino
Llegué al puente que muy pocos logran cruzar.
-¡Pasa! -exclamó el guardián, pero me reí y le dije:
-Hay tiempo.
Entonces él sonrió y cerró los portones.
Al puente que muy pocos logran cruzar llegaron jóvenes y viejos. A
todos ellos se les denegó la entrada. Yo estaba ahí cerca,
holgazaneando, y fui contándolos, uno a uno, hasta que, cansado ya
de sus ruidos y protestas, volví al puente que muy pocos logran
cruzar.
La muchedumbre cerca del portón chilló:
-¡Este hombre llega tarde!
Pero me reí y les dije:
-Hay tiempo.
-¡Pasa! -exclamó el guardián mientras yo ingresaba; luego sonrió y
cerró los portones.
Robert W. Chambers
El emisor del diálogo anterior es:
Seleccione una:
a. Un sabio
b. Un guardián
c. El narrador.
d. Un hombre osado
Octavio Paz
Destino
Llegué al puente que muy pocos logran cruzar.
-¡Pasa! -exclamó el guardián, pero me reí y le dije:
-Hay tiempo.
Entonces él sonrió y cerró los portones.
Al puente que muy pocos logran cruzar llegaron jóvenes y viejos. A
todos ellos se les denegó la entrada. Yo estaba ahí cerca,
holgazaneando, y fui contándolos, uno a uno, hasta que, cansado ya
de sus ruidos y protestas, volví al puente que muy pocos logran
cruzar.
La muchedumbre cerca del portón chilló:
-¡Este hombre llega tarde!
Pero me reí y les dije:
-Hay tiempo.
-¡Pasa! -exclamó el guardián mientras yo ingresaba; luego sonrió y
cerró los portones.
Robert W. Chambers
El receptor del mensaje de la historia es:
Seleccione una:
a. El lector.
b. Los jóvenes.
c. El guardián.
d. El hombre.
Considerando:
–Que ante el frustrado nombramiento del doctor Alejandro Ordóñez
Maldonado como hijo putativo de Antioquia (nombramiento que, ante
presión mediática, fue reemplazado por ceremonia privada en el
restaurante Mondongo’s, e imposición de collar de arepas al
homenajeado, deglutidas en el acto por él mismo), es necesario
compensar el desaire con nuevo homenaje a otra figura pública
ejemplar; Que las canciones del bardo antioqueño Juan Luis Londoño
Arias, alias Maluma, son poesía urbana y muestra evidente de audacia
lírica y de calidad literaria, dignas de ser evidenciadas como ejemplo
ante la juventud antioqueña; Que al permear su obra con influencias
sajonas, a la manera de Borges, como en su celebrada canción Las
cuatro babies, el artista promueve el bilingüismo y la apertura hacia
nuevas culturas, factores fundamentales para hacer de Antioquia la más
educada, como fue el deseo de la administración anterior.
Corvina al ajillo
Si es necesario limpia la corvina, con ayuda de papel de cocina quita
el exceso de humedad del pescado y espolvorea ligeramente harina.
En una sartén agrega dos cucharadas de aceite y pon a calentar a fuego
medio, sella los filetes por ambos lados y retira los filetes. En la misma
sartén pon a saltear el ajo previamente rallado o finamente picado,
antes de que dore, agrega media taza de vino blanco, sazona con sal y
pimienta y revuelve.
Deja hervir y agrega los filetes, deja cocinar por unos minutos más para
que se mezclen los sabores. Si lo deseas puedes decorar con perejil o
cilantro.
Si quieres espesar la salsa agrega una cucharadita de harina, revuelve
bien y deja hervir.
Fuente: https://encolombia.com/vida-
estilo/alimentacion/recetas/pescado/corvina-al-ajillo/
Completa:
Nosotros llegaremos a las instituciones educativas con un taller muy
práctico, donde les vamos a enseñar que es un conflicto, _______ el
hombre naturalmente llega en debate y en conflicto, ___ _____la
naturaleza del ser humano es enfrentar emociones,________ nosotros
les mostramos cómo podemos llevar con objetividad las mismas para
ayudar a resolver los conflictos en las instituciones educativas. Es
necesario entender que los conflictos no solo se dan entre pares, entre
estudiantes, sino _______ hay conflictos entre padres de familia,
profesores ______ es ahí donde nosotros empezamos a crear un
diagnóstico para poder ayudar a la comunidad educativa, para
empoderar a los chicos de grados octavo a décimo y puedan generar
un cambio positivo en su convivencia.
Seleccione una:
a. Porque, pues, pero, también, y
b. Sin embargo, en definitiva, no obstante, pero, también
c. Aunque, además, sin embargo, que, pero
d. Asimismo, porque, por el contrario, también, además
(I) Las músicas tradicionales en Colombia son tantas, tan variados sus
ritmos, tan diferentes sus instrumentos, tan diversas las formas de
interpretarlos y tan dispares las miradas de sus intérpretes, que es
evidente la ausencia de reglas que puedan establecerse, o trazar
líneas fijas que las definan histórica y territorialmente en sus
componentes musicales más íntimos.
(II) Pero ¿cuál es verdaderamente la longitud adecuada? Habría que
embalsamar los brazos de esos hombres y mostrarlos cuando surgiera
la ocasión. No hay un estándar, una medida oficial, un metraje único.
Esa es tal vez la mayor virtud de las músicas tradicionales en
Colombia y al mismo tiempo un gran reto: no hay dos gaitas iguales en
el Atlántico, así como no hay dos marimbas de chonta iguales en el
Pacífico sur, ni dos golpes de tambor que se repitan exactos aunque
produzcan el mismo sonido, o dos abozaos idénticos en el Chocó.
Virtud porque expresa una fecunda diversidad creativa y una riqueza
inconcebible en las formas de interpretar esos instrumentos, en los
sonidos que producen y en el color de la fiesta o el acontecimiento que
con ellos se acompaña. Reto porque implica generar conceptos y
métodos específicos y porque resulta arduo delimitar los géneros, los
toques o los instrumentos y sistematizarlos, o encontrar matrices y
bases que permitan definir lo que es un vallenato sin despertar el
descontento de alguien que considera que es otra cosa muy distinta.
O establecer sin lugar a discusiones lo que es el abozao chocoano en
Quibdó cuando en Nuquí le cambian alguna nota.
(III) Cuando se le pregunta a un fabricante de gaitas, o a un músico
gaitero de la costa norte colombiana, cuál es el tamaño adecuado para
la caña de una gaita, es normal que estire uno de sus brazos y señale
desde el hombro hasta la punta de sus dedos la longitud ideal. Su
respuesta es nítida y no admite controversia, la longitud es esa que
muestra, no otra, pero al preguntársele a otro músico éste no señalará
el brazo de su compañero, sino el suyo. Todos los fabricantes de
gaitas e intérpretes de este instrumento que habitan las sabanas del
norte del país podrían desfilar señalando sus brazos desde el hombro
hasta la punta de sus dedos, siempre ofreciendo la misma respuesta:
el largo ideal de la caña es el de sus brazos.
Tomado de:
http://www.mincultura.gov.co/SiteAssets/documentos/migracion/DocNe
wsNo822DocumentNo1048.PDF
Seleccione una:
a. Una anécdota
b. Un concepto
c. Una pregunta
d. Una cita
Octavio Paz