Вы находитесь на странице: 1из 5

Conducta pasiva, agresiva y

asertiva en el mundo laboral


Del Campo 18 DIC 08
 14Comentar


Toda actividad humana esta caracterizada porque de un modo u otro se


produce una interrelación entre distintos seres humanos, presentes o no en
la actividad, pero es imposible que (salvo un acto de reflexión total de una
persona) no se produzca una relación interpersonal, tanto en la vida
personal como en la profesional.

Es decir, es inevitable en el mundo actual que se produzcan las relaciones


interpersonales, siendo un lugar muy importante donde sedan estas, en el
trabajo o en la búsqueda del mismo.

Si trasladamos las conductas de las personas a sus formas de buscar


empleo o de cómo trabajan en su puesto actual, quizás observaríamos
claramente la diferencia.

Buscar empleo de una forma pasiva, es decir, esperando que te vengan a


casa a ofrecer trabajo, es algo que nadie contempla; por lo contrario,
realizar la búsqueda de empleo, o buscar trabajo siendo agresivo (es
decir, discutiendo con los oferentes de trabajo, no aceptando más
condiciones en el puesto que las que el marque,…) es algo que tampoco
creo que lo contempléis.

Siempre se ha hablado de que las personas en sus relaciones se comportan


o de un modo pasivo o de un modo agresivo, o una mezcla de ellas
dependiendo de las situaciones a las que se deben de enfrentar.

No obstante últimamente, ha aparecido con mucha fuerza la postura o


el comportamiento asertivo.
Pasivo, es aquel comportamiento en el que el sujeto queda a merced de los
deseos, órdenes o instrucciones de los demás. Antepone el bienestar de los
demás al suyo, entendido éste como los deseos, ambiciones u opiniones.
Los demás están felices, no me genera a mi problemas. En un ejemplo:
“Alguien va a comer fuera y a la hora de traerle el primer plato, los cubiertos
están sucios. El sujeto de conducta pasiva, limpiaría los cubiertos y
comería sin mayores problemas”.

Agresivo es aquel que piensa que “mientras más débiles son los demás,
más fuerte soy yo”. Se alimenta de conductas pasivas para redefinir
su carácter agresivo. Dejar al interlocutor en ridículo es su forma de
entender las relaciones. Menosprecio a los demás, orgullo y prepotencia,
son características de su forma de actuar. En el ejemplo anterior:”Llamaría
al camarero, montaría una fuerte discusión, pediría el libro de reclamaciones
y su intento sería dejar en ridículo al camarero, al cocinero y al propio
restaurante. No disfrutaría de la comida”.

Ambas conductas son generadoras de estrés. La primera, porque


realmente está a merced de lo que los demás desean, con lo que está
siempre a la expectativa de lo que pueda pasar. La segunda conducta,
genera estrés dado que siempre está a la expectativa para emprender una
acción combativa, a discutir…

Si tú fueses un empleador ¿buscarías a un profesional agresivo? Claro


que no, salvo que fueses capaz de controlarlo cosa que te estaría
motivando el poner a prueba tu forma de ser constantemente.
¿Y buscarías un perfil profesional pasivo? Aparentemente diríais que si,
pero pronto os darías cuenta que la conducta pasiva lleva aparejada una
falta de iniciativa, de resolución de problemas de un modo independiente,
de capacidad de creatividad y sobre todo, una personalidad carente de
talento, es decir, la figura de un trabajador que siempre vais a tener “que
estar encima de él” para motivarlo, para guiarlo, para decirle lo que tiene
que hacer en cada momento, por lo que, aunque su carácter de sumisión
fuese bueno para que lo dirigieseis, acabarías prescindiendo de él porque
trabajaríais el doble.

¿Qué preferirías por lo tanto?

Pues desde hace unos años para aquí ha entrado en juego un nuevo estilo
de comportamiento: “la conducta asertiva”. Es aquel estilo de conducta en
la que el sujeto defiende sus derechos e ideas de la mejor forma posible
pero siempre con la perspectiva de no perjudicar a los demás. Siempre esta
dispuesto al diálogo, a la negociación. No quiere decir que no se produzca
nunca confrontación, pero que esta en caso de producirse, es mínima y
siempre abierta al diálogo y a la negociación y por lo tanto a la consecución
de un compromiso.

En el ejemplo: “Hablaría sencillamente con el camarero, le solicitaría unos


cubiertos nuevos y disfrutaría de la comida”. ¿Generaría esta conducta
estrés?. En principio no, dado que el sujeto no está a la expectativa nunca,
solamente si se encuentra en una situación, intenta defender su actuación
sin perjudicar a ninguna otra parte, pero no le genera inicialmente ningún
tipo de ansiedad.

Desde este punto de vista, está claro que en nuestra vida diaria,
ganaríamos mucho manteniendo siempre una actitud asertiva, lo que nos
llevaría a mantener una visión del mundo mucho más abierta.

Y ya no digamos en el mundo laboral. Esta actitud hace que tú, por ti


mismo, puedas abrir puertas en cualquier momento y situación, y esta es la
cualidad importante que buscan todos los empresarios hoy en día. No la
lucha constante con el agresivo ni la sumisión del pasivo, sino la
interrelación personal y creativa del asertivo.

Tu búsqueda de trabajo así como tu comportamiento ya en un puesto


laboral debe de guiarse por este comportamiento asertivo. Te generará
menos estrés, menos ansiedad, pero sobre todo triunfarás antes en
tu búsqueda laboral.

Recientemente en un curso que impartí quise buscar un ejemplo


“cinematográfico” de las tres conductas y se me han ocurrido los siguientes
(creo que estaréis de acuerdo) y son una clara forma de identificar los tres
tipos de actitud:

–Pasivo. El prototipo de actor pasivo o de papeles pasivos es Ben Stiller.


Películas como “Los padres de el” o “Los padres de ella”, son muestras de
comportamientos pasivos, nunca querer perjudicar a los demás, aceptar los
deseos de otros y mantener una postura sumisa y estresada ante lo que le
puede venir encima.

–Agresiva. El prototipo de actor, es este caso actriz agresiva, es Glenn


Close. “Las amistades peligrosas” o “Atracción fatal”, muestran la imagen de
alguien por hacer prevalecer sus deseos a los de los demás perjudicándolos
en lo más posible. Es más fuerte mientras más débiles son los demás.

–Asertiva. Tuve que recurrir al cine clásico. El actor asertivo por excelencia
es James Stewart. En todas sus películas, intentaba solucionar las
situaciones difíciles mediante el diálogo, defendiendo sus ideas, pero sin
intentar perjudicar nunca a nadie.
Como conclusión, me han gustado mucho las palabras de Gary Zukav (El
lugar del alma, 1990) :

“carentes de respeto, nuestras experiencias son brutales y destructivas.


(…), nuestras experiencias se muestran compasivas y solícitas. Tarde o
temprano llegaremos a respetar cualquier forma de vida. Nuestra elección
reside en saber cuándo sucederá y los tipos de experiencias que habremos
de sufrir a medida que vamos aprendiendo”.

Cuando te encuentres en una búsqueda laboral recuerda que en una


entrevista no te gustaría encontrar a un candidato sumiso que aceptase
todo lo que tu le dijeses ni tampoco por lo contrario un perfil que estuviese
buscando la confrontación constante. Desearías tener delante a una
persona dialogante, empática y con clara .

Вам также может понравиться