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Cómo calcular la pensión de

alimentos y su reajuste

Existe mucha información respecto a la pensión de alimentos: desde y hasta


cuándo se deben, cómo solicitarlos en los Tribunales, qué hacer si no son
pagados, etcétera. Sin embargo, las mayores dudas se suscitan en cuanto al
monto que es posible solicitar; cuándo se aplica y cómo se calcula el reajuste;
y si éste puede ser cobrado si no se ha aplicado.

La ley establece los montos mínimos y máximos que puede fijar el juez como
pensión de alimentos. Así, se presume que el alimentante (que es quien debe
los alimentos) tiene los medios para otorgarlos. Por ello, el monto mínimo de la
pensión de una pensión alimenticia no puede ser inferior a un 40% de un
Ingreso Mínimo Remuneracional, tratándose de un niño. Si son dos o más,
este monto no puede ser inferior al 30% por cada uno de ellos. Veamos los
siguientes ejemplos:

1) Roberto es demandado de alimentos por la madre de su hijo Gabriel, sin


embargo no es posible demostrar cuál es el ingreso de Roberto, ya que éste
indica encontrarse cesante y no existe información en Servicio de Impuestos
Internos ni está afiliado a una AFP. Como vimos, esto no significa que Roberto
no deba pagar pensión alimenticia, si no que el Tribunal realizará el siguiente
cálculo a fin de determinar el monto de la pensión:

Ingreso Mínimo Remuneracional actual: $210.000

1 sólo hijo (Gabriel) => 40% de $210.000 = $84.000

Esto significa que Roberto deberá pagar, como mínimo, $84.000 de pensión
alimenticia para la manutención de su hijo Gabriel.

2) Si Roberto tuviera dos hijos, Gabriel y Rocío, el mínimo de la pensión


alimenticia es el 30% de un Ingreso Mínimo Remuneracional por cada niño, es
decir:

Ingreso Mínimo Remuneracional actual: $210.000

2 hijos (Gabriel y Rocío) => 30% de $210.000 = $63.000 por cada uno =>
$63.000 X 2 = $126.000
Esto significa que Roberto deberá pagar, como mínimo, $126.000 de pensión
alimenticia para la manutención de sus hijos Gabriel y Rocío.

No obstante, en la práctica encontramos que existen padres que pagan


pensiones alimenticias muy por debajo de estos montos ¿Por qué ocurre esto?

Esto pasa porque la propia ley se pone en el caso que el alimentante no tenga
los medios suficientes para pagar los montos mínimos así calculados,
permitiendo que el juez rebaje prudencialmente la pensión cuando el padre así
lo justifique y demuestre.

Además, la ley establece el monto máximo de la pensión de alimentos al que


puede ser condenado el alimentante, el cual corresponde a un 50% de sus
rentas. Así, siguiendo el ejemplo anterior, si Roberto ganara en total $350.000
no puede el juez fijar una pensión alimenticia mayor de $175.000 (50% de
$350.000).

¿Qué ocurre con el reajuste de la pensión de alimentos?

La ley también ha regulado este tema, disponiendo que, si la pensión


alimenticia no se ha fijado en un porcentaje de la renta del ali mentante, en
ingresos mínimos o en algún otro valor reajustable, es decir, se trate de una
suma determinada, ésta se reajustará semestralmente de acuerdo al alza que
experimente el IPC. Vale decir, la pensión alimenticia es esencialmente
reajustable.

Es muy importante tener en cuenta que la reajustabilidad de la pensión


alimenticia no opera en forma automática, sino que debe ser solicitada al
Tribunal. Será, entonces, el Tribunal respectivo el que ordenará reliquidar la
pensión alimenticia a solicitud de la persona que la recibe.

Lo más común es que sea fijada en ingresos mínimos o en un porcentaje de


ellos, por lo que la variación de éste implicará el reajuste de la pensión. Por
ejemplo, si en los casos supuestos más arriba, el Ingreso Mínimo
Remuneracional varía y sube de $210.000 a $250.000, Roberto deberá pagar,
en el primer caso, a su hijo Gabriel una pensión alimenticia reajustada de
$100.000 (recordemos que antes era de $84.000) y en el segundo caso, a sus
hijos Gabriel y Rocío, una pensión de alimentos reajustada de $150.000
(recordemos que antes era de $126.000).

¿Por qué es importante solicitar el reajuste de la pensión alimenticia?


Dado que la pensión de alimentos no se reajusta automáticamente, sino que
es necesario solicitarla al Tribunal, para que se realicen los cálculos
matemáticos que determinarán la nueva pensión, las pensiones pagadas sin
reajuste, por no haberse realizado este trámite, se entienden pagadas
correctamente, perdiéndose el reajuste debido, ya que éste no será posible
cobrarlo posteriormente al alimentante.

Por otro lado, si el Tribunal ha reliquidado la pensión y el alimentante no paga


la pensión de alimentos reajustada, se pueden ejercer todas las medidas de
apremio en su contra por el saldo impago, ya que se entiende incumplida la
obligación de dar alimentos, toda vez que ésta sólo se entiende cumplida
cuando su pago es íntegro y oportuno.

Por último, está la razón más evidente de todas, que precisamente justifica el
reajuste en sí mismo, y es que el costo de la vida tiende a subir (costo de los
alimentos, de la locomoción, etc.), por lo que el monto de una pensión
alimenticia fijada dos años atrás, probablemente ya no sea suficiente para
cubrir las necesidades del alimentario hoy en día.

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