Вы находитесь на странице: 1из 2

Neuroliderazgo, una nueva forma de ejercer la gerencia

Actualmente, el neuroliderazgo se plantea como una disciplina innovadora para la gestión de


proyectos, no sólo en lo que se refiere a las habilidades tradicionales que se asocian al rol de líder
sino, además, al incorporar otras novedosas como la actividad del cerebro, los procesos mentales,
la atención y la memoria, entre otros.

O dicho por el reconocido teórico canadiense Henry Mintzberg: «El neuroliderazgo se centra en
cómo los individuos toman decisiones y resuelven problemas en un ambiente social específico, así
como en la regulación de sus emociones y las opciones de cambio».

Cinco conceptos para entender el neuroliderazgo

El neuroliderazgo no ha surgido de la nada. Por el contrario, se apoya en recientes investigaciones


sobre la actividad cerebral humana, concretamente de la neurociencia, y pretende aprovecharlos
al máximo para mejorar los resultados de la acción directiva.

La definición básica de este concepto habla de una herramienta que busca entender los procesos
de funcionamiento del cerebro en su sentido más amplio y de esta manera optimizar la labor de
dirección de negocios e influir positivamente en el entorno en el que se opera desde el rol de líder
empresarial.

De ahí que no parezca raro ver que algunas empresas han empezado a implementarlo en campos
como el de Recursos Humanos o la dirección de equipos de trabajo, pues supone una alternativa
novedosa ante los métodos tradicionales.

Ahora bien, ¿en qué consiste realmente el neuroliderazgo? ¿Qué principios debes conocer antes
de llevarlo a la práctica en tu empresa? Repasemos algunos conceptos básicos que se relacionan
de una u otra forma con él:

 Capacidad de atención:
Está científicamente demostrado que la corteza prefrontal del cerebro se relaciona con la
capacidad de resolución de conflictos, la planificación estratégica y la toma de decisiones. Pues
bien, en este caso se trata de mantener un adecuado nivel de atención para que de este modo se
activen los circuitos cerebrales de dicha zona del cerebro y se enfoquen los asuntos que más
atención ameriten.

 Neuroplasticidad:

Este concepto hace alusión a la capacidad del cerebro para adaptarse a situaciones diversas, así
como de regenerarse, reformarse y reorganizarse a sí mismo. Bien aplicada, la neuroplasticidad
supone un giro radical en lo que al conocimiento y la experiencia se refiere. De hecho, algunos
estudiosos en la materia la consideran una herramienta imprescindible para la adaptación a
nuevos entornos, los cambios de hábitos y de percepciones y, en últimas, las transformaciones en
la manera de ver el mundo y, claro, de ejercer la labor directiva.

 Neuroaprendizaje:

Se centra en las distintas maneras en que el cerebro adquiere conocimientos. Según esto, existen
dos formas de hacerlo: por asociación o por experiencia. En la primera de ellas lo fundamental es
aprender algo partiendo de otra cosa que ya había antes; en la segunda, la experiencia –es decir,
el contacto directo con la realidad– es la mejor manera de adquirir conocimientos. Por tanto, un
buen líder empresarial debe aplicar estos principios para sí mismo y crear las condiciones para que
sus equipos de trabajo lleven a cabo satisfactoriamente el proceso de aprendizaje.

En últimas, el neuroaprendizaje es una nueva forma de emprender la labor directiva y el liderazgo,


tomando como base la comprensión de los procesos mentales tanto para quien ocupa dichas
áreas como para el conjunto de sus colaboradores. ¿Te animarías a probarlo en tu negocio? ¿Qué
beneficios crees que obtendrías?

Вам также может понравиться