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NOTA IMPORTANTE:

Se hace del conocimiento de los sustentantes que


resolvieron el cuestionario de la primera etapa del
Decimoséptimo Concurso Interno de Oposición para la
designación de Jueces de Distrito, que las preguntas que
integraron el examen no volverán a utilizarse en algún
otro concurso y, por consiguiente, serán dadas de baja de
la base de preguntas del Instituto de la Judicatura Federal.

Atentamente
“Por la excelencia en la impartición de justicia”

(Rúbrica)
Magdo. Leonel Castillo González
Director General
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

1. Se promueve un juicio de amparo en contra de un requerimiento de información y documentación


que formuló la Comisión Federal de Competencia para investigar prácticas que pudieran resultar
monopólicas. En este caso, la suspensión provisional solicitada por el quejoso:

A. Debe concederse siempre y cuando exista apariencia del buen derecho, porque el requerimiento afecta
el secreto bancario o industrial.
B. Debe negarse, porque de concederse se contravendrían disposiciones de orden público.
C. Debe concederse.

Justificación: No. Registro: 181645. Jurisprudencia. Materia(s): Administrativa. Novena Época. Instancia:
Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XIX, Abril de 2004. Tesis: 2a./J.
37/2004. Página: 447

SUSPENSIÓN EN EL JUICIO DE AMPARO. NO PROCEDE CONCEDERLA CONTRA LOS


REQUERIMIENTOS DE INFORMACIÓN Y DOCUMENTACIÓN FORMULADOS POR LA
COMISIÓN FEDERAL DE COMPETENCIA EN EJERCICIO DE SUS FUNCIONES PARA
INVESTIGAR PRÁCTICAS MONOPÓLICAS, PORQUE DE OTORGARSE SE AFECTARÍA EL
INTERÉS SOCIAL Y SE CONTRAVENDRÍAN DISPOSICIONES DE ORDEN PÚBLICO. Es
improcedente conceder la suspensión solicitada en contra de los requerimientos de información y
documentación formulados por la Comisión Federal de Competencia en ejercicio de sus atribuciones previstas
en los artículos 24, fracción I y 31, primer párrafo, de la Ley Federal de Competencia Económica, dirigidas a
investigar prácticas que pueden resultar monopólicas, en virtud de no satisfacerse el requisito contemplado en
la fracción II del artículo 124 de la Ley de Amparo, consistente en que no se afecte el interés social, ni se
contravengan disposiciones de orden público. Lo anterior porque la ley citada en primer lugar, conforme a su
artículo 1o., es reglamentaria del artículo 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y,
por ende, de orden público e interés social, por lo que al ser su fin principal proteger el proceso de libre
concurrencia en todas las áreas de la economía nacional, mediante la prevención, sanción y eliminación de
monopolios, prácticas monopólicas y demás sistemas que afecten el expedito funcionamiento del mercado,
obligando al público consumidor a pagar precios altos en beneficio indebido de una o varias personas, los
indicados requerimientos no son susceptibles de suspenderse, porque de lo contrario se permitiría a las
quejosas dejar de proporcionar los informes y documentos requeridos, con lo cual se harían nugatorias las
facultades relativas y se paralizaría el procedimiento de investigación respectivo.

Contradicción de tesis 116/2003-SS. Entre las sustentadas por el Tercero, Cuarto, Sexto, Noveno y Décimo
Segundo Tribunales Colegiados en Materia Administrativa del Primer Circuito. 17 de marzo de 2004. Cinco
votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretario: Alberto Miguel Ruiz Matías.- Tesis de
jurisprudencia 37/2004. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del veintiséis
de marzo de dos mil cuatro.

Ejecutoria: No es óbice para arribar a la conclusión anterior, el razonamiento vertido por los Tribunales
Colegiados Sexto y Noveno en Materia Administrativa del Primer Circuito en el sentido que de negarse la
suspensión definitiva se causarían a las quejosas daños y perjuicios de difícil reparación, en virtud de que se
les requiere información de naturaleza confidencial, lo cual puede implicar revelación de secretos industriales
o comerciales; luego, aun cuando se obtuviera la protección federal, la información perdería su
confidencialidad, motivos por los cuales no debe negarse la suspensión de los oficios por medio de los cuales
se requiere a las accionantes del juicio de garantías la información respectiva.

En efecto, en la exposición de motivos de la Ley Federal de Competencia Económica, entre otras cosas, se
razonó lo siguiente: "Se prevé en el proyecto exista una estricta confidencialidad de toda la información que
se proporcione a la comisión, o que ésta obtenga en sus investigaciones. De otra manera, la cooperación de los
agentes económicos para hacer cumplir la ley se dificultaría. Las resoluciones de la comisión incluirían los
elementos necesarios para describir la problemática enfrentada y el análisis llevado a cabo para motivar y
fundamentar la resolución, cuidando en todo momento de no revelar información comercialmente valiosa que
pudiere dañar a los interesados."

De acuerdo con la exposición de motivos preinserta es obvio que toda la información y documentación
requerida por la Comisión Federal de Competencia o la obtenida por ésta en ejercicio de sus facultades de
investigación es de estricta confidencialidad, carácter que no debe perder aun cuando dicha comisión emita la
resolución respectiva, pues al fundar y motivar sus resoluciones, cuidará de no revelar la información y
documentación valiosa que se le hubiere proporcionado y que pudiera causar daños a los interesados.- En
otras palabras, en la exposición de motivos preinserta se instituye el principio de confidencialidad, conforme
al cual la información que se entregue a la Comisión Federal de Competencia es secreta, con la finalidad de
proteger los derechos e intereses de quien la haya proporcionado, y evitarle perjuicios de cualquier índole que
su revelación pueda causarle; por tanto, la naturaleza de esa información y documentación recibida por la
comisión indicada impone a los funcionarios y empleados de ésta el deber de no divulgarla o difundirla;
luego, legalmente no podrán hacerla del conocimiento de terceras personas o del público en general, excepto
cuando medie orden de autoridad competente, y únicamente podrán utilizar la documentación e información
de que se trate para los fines para los cuales fue solicitada.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

2. La suspensión de oficio debe decretarse de plano por el Juez de Distrito:

A. En el auto en que admita la demanda.


B. En el auto del incidente de suspensión.
C. En el auto que ordena formar expedientillo especial para tramitar la suspensión de oficio.

Justificación:

Artículo 123 Ley de Amparo.

Procede la suspensión de oficio:

I.- Cuando se trate de actos que importen peligro de privación de la vida, deportación o destierro o alguno de
los prohibidos por el artículo 22 de la Constitución Federal;

II.- Cuando se trate de algún otro acto, que, si llegare a consumarse, haría físicamente imposible restituir al
quejoso en el goce de la garantía individual reclamada.

La suspensión a que se refiere este artículo se decretará de plano en el mismo auto en que el juez admita la
demanda, comunicándose sin demora a la autoridad responsable, para su inmediato cumplimiento, haciendo
uso de la vía telegráfica, en los términos del párrafo tercero del artículo 23 de esta ley.

Los efectos de la suspensión de oficio únicamente consistirán en ordenar que cesen los actos que directamente
pongan en peligro la vida, permitan la deportación o el destierro del quejoso o la ejecución de alguno de los
actos prohibidos por el artículo 22 constitucional; y tratándose de los previstos en la fracción II de este
artículo, serán los de ordenar que las cosas se mantengan en el estado que guarden, tomando el juez las
medidas pertinentes para evitar la consumación de los actos reclamados.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

3. El actuario de un juzgado civil traba embargo sobre un vehículo automotor. En contra de ese
embargo, una persona promueve amparo indirecto, en el que alega violación a su derecho de propiedad
y, para acreditar su interés jurídico, exhibe como prueba el original de la tarjeta de circulación del
vehículo embargado, expedida a su nombre. En tal caso, conforme al criterio de la Primera Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, el juez de Distrito:

A. Debe tener por acreditado el interés jurídico del quejoso, ya que el alcance probatorio de la tarjeta de
circulación es idóneo, tanto para identificar el vehículo como para acreditar la propiedad de éste.
B. No debe tener por acreditado el interés jurídico del quejoso, pues el alcance probatorio de la tarjeta de
circulación se limita a la identificación del vehículo automotriz que ahí se refiere y al permiso que
éste tiene para circular, pero no prueba la propiedad del vehículo.
C. Debe tener por acreditado el interés jurídico del quejoso, en virtud de que la tarjeta de circulación
expedida a nombre del tenedor, genera la presunción de que éste es el propietario del vehículo.

Justificación:

No. Registro: 171897


Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVI, Julio de 2007
Página: 175
Tesis: 1a./J. 61/2007
Jurisprudencia
Materia(s): Civil

TARJETA DE CIRCULACIÓN VEHICULAR. NO ES UN DOCUMENTO IDÓNEO, POR SÍ


MISMO, PARA ACREDITAR EL INTERÉS JURÍDICO DE QUIEN PROMUEVE EL JUICIO DE
AMPARO EN CALIDAD DE PROPIETARIO DEL VEHÍCULO AUTOMOTRIZ A QUE SE
REFIERE. Esta Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido en diversas tesis que el interés jurídico
en el juicio de amparo debe acreditarse fehacientemente y no inferirse con base en presunciones. El interés
jurídico está directamente vinculado con el derecho que se dice vulnerado por el acto de autoridad, por lo
cual, cuando se acude al juicio de amparo reclamando el acto consistente en el embargo trabado sobre un
vehículo automotriz por afectar el derecho de propiedad del quejoso, debe demostrarse que el quejoso es
titular de tal derecho a fin de demostrar el interés jurídico en el juicio de amparo. Ahora bien, la tarjeta de
circulación vehicular sólo permite la identificación del vehículo automotriz referido en ella, es decir, su
alcance probatorio se limita a comprobar que el vehículo que describe cuenta con el permiso de circulación
respectivo; de ahí que dicha tarjeta, por sí misma, no sea un documento idóneo para acreditar la propiedad del
vehículo, pues sólo establece una presunción respecto de ese derecho y, como se ha dicho, el interés jurídico
debe acreditarse fehacientemente y no con base en presunciones.

Contradicción de tesis 153/2006-PS. Entre las sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Cuarto Circuito, Tercer Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Cuarto Circuito, Segundo Tribunal
Colegiado del Quinto Circuito y el Primer Tribunal Colegiado del Octavo Circuito. 18 de abril de 2007.
Unanimidad de cuatro votos. Ausente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Ponente: José Ramón Cossío Díaz.
Secretario: Fernando A. Casasola Mendoza.

Tesis de jurisprudencia 61/2007. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
veinticinco de abril de dos mil siete.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

4. El juez de Distrito al proveer sobre la demanda de amparo en la que se señala como acto reclamado
la aprobación de la resolución de no ejercicio de la acción penal, tiene al indiciado con el carácter de
tercero perjudicado. En este supuesto ¿cómo debe calificarse tal determinación?

A. Jurídicamente acertada.
B. Jurídicamente incorrecta, porque la figura del tercero perjudicado en los juicios de amparo que se
promuevan contra resoluciones de aprobación de inejercicio de la acción penal no está prevista en el
artículo 5º de la Ley de Amparo.
C. Jurídicamente incorrecta, ya que en materia penal no existen terceros perjudicados, pues se
controvierten intereses de índole pública y no privada.

Justificación: No. Registro: 189303. Jurisprudencia. Materia(s): Penal. Novena Época. Instancia: Primera
Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XIV, Julio de 2001. Tesis: 1a./J. 42/2001.
Página: 200

INDICIADO. TIENE EL CARÁCTER DE TERCERO PERJUDICADO CUANDO EL ACTO


RECLAMADO EN EL JUICIO DE GARANTÍAS SEA LA RESOLUCIÓN DE APROBACIÓN DE
NO EJERCICIO DE LA ACCIÓN PENAL. Los incisos a) y b) de la fracción III del artículo 5o. de la Ley
de Amparo, establecen como regla la no existencia de tercero perjudicado cuando el acto reclamado provenga
de un juicio o controversia del orden penal; sin embargo, dicho precepto legal debe ser interpretado en la
actualidad atendiendo a la reforma del artículo 21, cuarto párrafo, de la Ley Fundamental, que entró en vigor
el primero de enero de mil novecientos noventa y cinco y a la fracción VII del artículo 114 de la Ley de
Amparo, vigente a partir del diez de junio del año dos mil; debiendo, de esta forma, considerarse como una
excepción a la citada regla, el caso en el que en un juicio de amparo se señale como acto reclamado la
aprobación de la resolución de no ejercicio de la acción penal respecto de una denuncia, acusación o querella
que se hace sobre determinada persona. Ello en virtud de que en este supuesto el quejoso es precisamente la
parte ofendida, que considera que la conducta de los indiciados materia de la averiguación previa, es
constitutiva de delito y, por tanto, la resolución reclamada, vulnera garantías en su perjuicio, pero como hasta
antes de la reforma al artículo 21 constitucional vigente a partir del primero de enero de mil novecientos
noventa y cinco no se encontraba previsto el presupuesto de procedencia del juicio de amparo contra
resoluciones de aprobación de inejercicio de la acción penal y, por tanto, en la Ley Reglamentaria de los
Artículos 103 y 107 Constitucionales tampoco se había regulado la figura del tercero perjudicado en el juicio
de amparo en que se reclame ese tipo de resoluciones, debe concluirse que, para el caso, tampoco resulta
aplicable lo dispuesto en el inciso c) de la fracción III del artículo 5o. de la Ley de Amparo, ya que aun
cuando en este tipo de juicios de amparo, los indiciados tienen interés directo en que subsista el acto
reclamado, la intención del legislador no pudo ser la de contemplarlos en tal disposición con el carácter de
terceros perjudicados, por no encontrarse previsto en la época de creación de la norma el presupuesto de
procedencia del juicio de amparo que se ha mencionado. Consecuentemente, la figura del tercero
perjudicado en los juicios de amparo que se promuevan contra resoluciones de aprobación de
inejercicio de la acción penal, aun cuando no se encuentra prevista en alguna de las fracciones del
artículo 5o. de la Ley de Amparo, debe entenderse integrada, a este precepto, en razón de las reformas
al artículo 21 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, publicadas en el Diario
Oficial de la Federación de treinta y uno de diciembre de mil novecientos noventa y cuatro.

Contradicción de tesis 113/98. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Tercero en
Materias Administrativa y de Trabajo del Cuarto Circuito. 28 de marzo de 2001. Cinco votos. Ponente: Olga
Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Irma Leticia Flores Díaz.

Tesis de jurisprudencia 42/2001. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de veintitrés
de mayo de dos mil uno, por unanimidad de cuatro votos de los señores Ministros: presidente José de Jesús
Gudiño Pelayo, Humberto Román Palacios, Juan N. Silva Meza y Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Ausente: Juventino V. Castro y Castro.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

5. El artículo 27 de la Ley de Amparo, establece que las partes podrán autorizar para oír notificaciones
a cualquier persona con capacidad legal, quien quedará facultada para interponer los recursos que
procedan, ofrecer y rendir pruebas, alegar en las audiencias, solicitar su suspensión o diferimiento,
pedir se dicte sentencia para evitar la consumación del término de caducidad o sobreseimiento por
inactividad procesal y realizar cualquier acto que resulte ser necesario para la defensa de los derechos
del autorizante.

En conformidad con la interpretación hecha por la Suprema Corte de Justicia de la Nación de la parte
subrayada de ese precepto, determine si el autorizado del quejoso en términos amplios para oír
notificaciones, está facultado para desistir de la demanda de amparo.

A. Sí, porque las facultades previstas en el artículo 27 de la Ley de Amparo son enunciativas y no
limitativas.
B. No, porque el desistimiento no es un acto para la defensa de los derechos del autorizante.
C. Sólo si el autorizado es licenciado en Derecho.

Justificación:

Registro No. 171236, Novena Época, Instancia: Segunda Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta, XXVI, Octubre de 2007, Página: 211, Tesis: 2a./J. 188/2007, Jurisprudencia, Materia(s): Común

AUTORIZADO "EN TÉRMINOS AMPLIOS" PARA OÍR NOTIFICACIONES. NO TIENE


FACULTADES PARA DESISTIR DEL JUICIO DE AMPARO Y SUS RECURSOS. De la
interpretación literal y causal teleológica del segundo párrafo del artículo 27 de la Ley de Amparo, se colige
que si bien al autorizado "en términos amplios" para oír notificaciones en el juicio de amparo se le confieren
facultades de manera enunciativa y no limitativa, de tal suerte que puede considerársele como un auténtico
representante judicial, su actuación dentro del juicio de garantías queda sujeta a la condición de que los actos
que realice puedan estimarse necesarios para la defensa de los derechos de su autorizante. Por otra parte, el
desistimiento constituye la renuncia de la parte accionante a los actos procesales o a su pretensión litigiosa, lo
que pone de manifiesto la trascendencia de los efectos que genera; por tal motivo, la Segunda Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la jurisprudencia 2a./J. 119/2006, publicada en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXIV, agosto de 2006, página 295, estableció
como requisito necesario la ratificación del desistimiento de la parte quejosa, con la finalidad de que el
juzgador se cerciore de que efectivamente es voluntad del demandante abdicar en su pretensión. En este orden
de ideas, se concluye que el autorizado "en términos amplios" de las partes no tiene la facultad para
desistir del juicio de amparo y sus recursos, en razón de que su autorización está condicionada a todos
aquellos actos necesarios para la defensa de su autorizante, dentro de los cuales no queda comprendida
tal figura, porque no se ubica en la línea de la defensa de los derechos de las partes del juicio de
garantías, resultando necesario que estas últimas, no sus autorizados "en términos amplios", manifiesten
expresamente la decisión de desistir del juicio y sus recursos, no solamente con la suscripción del ocurso
correspondiente, sino mediante la celebración del acto procesal de la ratificación de esa expresión de
voluntad.

Precedentes: Contradicción de tesis 151/2007-SS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado
del Décimo Primer Circuito, el Primer Tribunal Colegiado en Materias Penal y Administrativa del Vigésimo
Primer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito. 26 de septiembre de
2007. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente: Mariano Azuela
Güitrón. Secretario: José Antonio Abel Aguilar Sánchez.

Tesis de jurisprudencia 188/2007. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintiséis de septiembre de dos mil siete.

Nota: La tesis 2a./J. 119/2006 citada, aparece publicada con el rubro: "DESISTIMIENTO EN EL AMPARO.
DEBE SER RATIFICADO POR EL QUEJOSO."

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

6. La omisión de la junta de acordar lo procedente sobre el ofrecimiento de trabajo formulado por la


parte patronal:

A. Es impugnable como violación procesal en el juicio de amparo directo que se promueva en contra del
laudo.
B. Debe impugnarse en amparo indirecto, al tratarse de una violación de imposible reparación.
C. Debe combatirse mediante el recurso de revisión ante la junta, previamente al ejercicio de la acción
constitucional.

Justificación:

No. Registro: 181703


Jurisprudencia
Materia(s): Laboral
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: XIX, Abril de 2004
Tesis: 2a./J. 43/2004
Página: 431

OFRECIMIENTO DE TRABAJO. LA OMISIÓN DE LA JUNTA DE ACORDARLO O DE


REQUERIR AL TRABAJADOR PARA QUE MANIFIESTE SI LO ACEPTA O LO RECHAZA,
INCLUSO CUANDO ÉSTE NO COMPARECE A LA AUDIENCIA DE LEY, ES UNA VIOLACIÓN
PROCESAL QUE LLEVA A CONCEDER EL AMPARO PARA QUE SE REPONGA EL
PROCEDIMIENTO. La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido que el ofrecimiento de trabajo,
cuando es de buena fe, tiene el efecto jurídico de revertir la carga de la prueba respecto de la existencia del
despido. Asimismo, ha considerado que la omisión de la Junta de acordar sobre el ofrecimiento y
requerimiento al trabajador para que manifieste si lo acepta o lo rechaza es una violación procesal
análoga a las previstas en el artículo 159 de la Ley de Amparo, en virtud de que afecta las defensas de
las partes en el juicio laboral y trasciende al resultado del fallo, por lo que debe concederse el amparo a
fin de que se reponga el procedimiento, ya que las partes en el juicio laboral no deben resentir la
desatención de las Juntas. Este criterio debe imperar incluso cuando el trabajador no comparece a la
audiencia de ley, dado que con tal omisión se deja de atender un aspecto procesal relevante, como es la
determinación de la carga de la prueba, pudiendo originar un laudo incongruente y dejar a las partes en estado
de inseguridad al no conocer su situación en el momento procesal oportuno, ya que con base en los artículos
685 y 771 de la Ley Federal del Trabajo, una vez que se produce la instancia de parte, la Junta tiene la
obligación de tomar las medidas necesarias para lograr la mayor economía, concentración y sencillez del
proceso, a fin de evitar prácticas viciosas, como la de considerar que el trabajador rehusó cualquier arreglo
conciliatorio y que puso de manifiesto su falta de interés en el proceso al no comparecer a la audiencia
respectiva, pues el interés de las partes subsiste mientras no exista manifestación expresa o indubitable en
contrario, sin que tampoco pueda considerarse que se consintió tácitamente la violación procesal
derivada de la citada omisión de la Junta, habida cuenta que la Ley Federal del Trabajo no establece
recursos ordinarios dentro del procedimiento para subsanarla.

Contradicción de tesis 180/2003-SS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia de
Trabajo del Cuarto Circuito y el entonces Tribunal Colegiado del Vigésimo Segundo Circuito. 26 de marzo de
2004. Cinco votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretaria: Maura Angélica Sanabria Martínez.

Tesis de jurisprudencia 43/2004. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
dos de abril de dos mil cuatro.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

7. La negativa de una Junta de Conciliación y Arbitraje a señalar nueva fecha para llevar a cabo la
reinstalación de la parte trabajadora, derivada del ofrecimiento de trabajo planteado en el juicio
laboral:

A. Constituye una violación procesal análoga a las previstas en el artículo 159 de la Ley de Amparo, por
lo que debe plantearse en el amparo directo que, en su caso, se promueva en contra del laudo
respectivo.
B. Debe impugnarse directamente en el juicio de amparo indirecto, por tratarse de una violación de
naturaleza intraprocesal que afecta de manera sustantiva los derechos de la parte agraviada.
C. Es impugnable en amparo indirecto, pero previamente el quejoso debe observar el principio de
definitividad, para lo cual debe agotar el recurso de revisión previsto en el artículo 849 de la Ley
Federal del Trabajo.

Justificación:

Registro No. 173730; Localización: Novena Época; Instancia: Segunda Sala; Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta XXIV, Diciembre de 2006; Página: 205; Tesis: 2a./J. 190/2006; Jurisprudencia;
Materia(s): laboral

OFRECIMIENTO DE TRABAJO. LA NEGATIVA A SEÑALAR NUEVA FECHA PARA QUE SE


REALICE LA REINSTALACIÓN DERIVADA DEL FORMULADO EN EL JUICIO, CONSTITUYE
UNA VIOLACIÓN PROCESAL ANÁLOGA A LAS PREVISTAS EN EL ARTÍCULO 159 DE LA
LEY DE AMPARO. Conforme al criterio sustentado por la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de
la Nación en las jurisprudencias 2a./J. 44/2000 y 2a./J. 43/2004, publicadas respectivamente en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XI, mayo de 2000, página 135 y Tomo XIX,
abril de 2004, página 431, con los rubros: "OFRECIMIENTO DE TRABAJO. LA OMISIÓN DE LA JUNTA
DE ACORDARLO O DE REQUERIR AL TRABAJADOR PARA QUE MANIFIESTE SI LO ACEPTA O
LO RECHAZA, ES UNA VIOLACIÓN PROCESAL QUE DA LUGAR A CONCEDER EL AMPARO
PARA QUE SE REPONGA EL PROCEDIMIENTO." y "OFRECIMIENTO DE TRABAJO. LA OMISIÓN
DE LA JUNTA DE ACORDARLO O DE REQUERIR AL TRABAJADOR PARA QUE MANIFIESTE SI
LO ACEPTA O LO RECHAZA, INCLUSO CUANDO ÉSTE NO COMPARECE A LA AUDIENCIA DE
LEY, ES UNA VIOLACIÓN PROCESAL QUE LLEVA A CONCEDER EL AMPARO PARA QUE SE
REPONGA EL PROCEDIMIENTO."; las violaciones relativas a la reinstalación del trabajador derivada del
ofrecimiento de trabajo son análogas a las previstas en el artículo 159 de la Ley de Amparo, porque afectan
las defensas del quejoso y trascienden al resultado del fallo, por lo que su estudio procede en el juicio de
amparo directo. Por tanto, el criterio antes expuesto es aplicable tratándose de la negativa a señalar nueva
fecha para que se realice la reinstalación derivada del ofrecimiento de trabajo formulado en el juicio, toda vez
que el trabajador perdió su derecho a ser reinstalado y trasciende al resultado del laudo, ya que si se llevara a
cabo la diligencia de reinstalación sin contratiempos podrían variar las cuestiones de fondo con relación a las
prestaciones reclamadas en el juicio y, por otra parte, si en la diligencia aludida ocurrieran incidencias que
impidieran concretar la reinstalación ofrecida y aceptada o no se hiciera en los términos ofrecidos, ello traería
consecuencias jurídicas que incidirían en la calificación de la oferta de trabajo.

Contradicción de tesis 179/2006-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Tercero y Sexto,
ambos en Materia de Trabajo del Primer Circuito. 22 de noviembre de 2006. Cinco votos. Ponente: Genaro
David Góngora Pimentel. Secretaria: María Marcela Ramírez Cerrillo.

Tesis de jurisprudencia 190/2006. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintinueve de noviembre de dos mil seis.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

8. Al momento de dictar sentencia, un juez de distrito condena a una persona imponiendo la pena de
prisión prevista en una ley derogada (vigente en la fecha en la que se cometió el delito) y la multa
prevista en la ley vigente. Lo anterior, pues tales sanciones son las que más benefician al reo, esto es, la
ley derogada prevé una pena de prisión menor y la vigente una multa menor a la que establecía la
derogada. Ahora bien, ¿tal condena se ajusta al principio de legalidad?

A. Sí se ajusta al principio de legalidad en materia penal, ya que ambas sanciones están previstas en ley,
sólo que respecto de cada una ellas impone la más benéfica, independientemente de que la norma esté
derogada o vigente.
B. Se ajusta al principio de legalidad en materia penal sólo si ambas sanciones se relacionan con la
misma descripción típica y están previstas en una ley vigente, sea al momento en que se cometió el
ilícito o al momento en que se resuelve el asunto, mas no en una ley intermedia.
C. No se ajusta al principio de legalidad en materia penal, porque tal proceder implica crear una pena
nueva.

Justificación:

No. Registro: 177281


Jurisprudencia
Materia(s): Constitucional, Penal
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXII, Septiembre de 2005
Tesis: 1a./J. 105/2005
Página: 129

INDIVIDUALIZACIÓN DE LA PENA. CUANDO EXISTA CONFLICTO DE LEYES EN EL


TIEMPO ENTRE NORMAS SANCIONADORAS QUE PRESCRIBEN LA APLICACIÓN DE MÁS
DE UNA PENA, EL JUZGADOR NO PUEDE SECCIONARLAS. El principio de legalidad en materia
penal, consagrado en el artículo 14 constitucional, prescribe que corresponde en exclusiva al legislador
establecer, por medio de leyes, los delitos y las penas aplicables por su comisión. A la luz de dicho principio,
es de estimarse que en aquellos casos en que existe un conflicto de leyes en el tiempo entre normas que
establecen, cada una de ellas, distintas penas que deben ser aplicadas al condenado como consecuencia de la
comisión del delito, el juzgador debe seleccionar aquella norma que resulte más benéfica para el inculpado,
pero en los exactos términos en que ésta fue prevista por el legislador. En consecuencia, en ese tipo de casos,
el juzgador no puede seccionar las disposiciones sancionadoras en conflicto, con el objeto de seleccionar,
entre la totalidad de penas previstas en éstas, aquellas que aisladamente consideradas resultan más benéficas
para el inculpado, puesto que tal proceder equivaldría a crear una pena nueva, distinta a las contempladas por
el legislador en las normas que se encuentran en conflicto, con base en los elementos integrantes de cada una
de ellas. Situación que contraviene de manera flagrante el principio constitucional antes referido.

Contradicción de tesis 48/2005-PS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Segundo, Tercero y
Quinto, todos en Materia Penal del Primer Circuito. 8 de junio de 2005. Cinco votos. Ponente: José de Jesús
Gudiño Pelayo. Secretario: José Alberto Tamayo Valenzuela.

Tesis de jurisprudencia 105/2005. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
trece de julio de dos mil cinco.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

9. En una demanda de garantías, el quejoso reclama del Director del Centro de Readaptación Social, la
orden decretada a fin de que sea trasladado de una celda a otra en el mismo reclusorio. En este
supuesto, por razón de la materia ¿en qué juez de Distrito recae la competencia para conocer del juicio
constitucional?

A. En un juez de Distrito en Materia Penal.


B. En un juez de Distrito en Materia Administrativa.
C. En cualquiera de los dos anteriores a prevención.

Justificación:

Registro: 168716
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVIII, Octubre de 2008,
Materia(s): Administrativa
Tesis: 1a./J. 43/2008
Página: 96

COMPETENCIA EN EL AMPARO. SE SURTE A FAVOR DE LOS JUZGADOS DE DISTRITO EN


MATERIA ADMINISTRATIVA SI LOS ACTOS RECLAMADOS CONTIENEN MEDIDAS
INHERENTES A LA ORGANIZACIÓN Y/O CONTROL DE UN CENTRO PENITENCIARIO, AUN
CUANDO EL QUEJOSO ESTÉ RECLUIDO EN ÉL. Si los actos reclamados en el juicio de amparo
indirecto únicamente contienen medidas de carácter disciplinario y de seguridad que deben regir dentro de un
centro penitenciario, no pueden considerarse de naturaleza penal, pues no provienen del proceso que se
instruyó al sentenciado, ni del juzgador penal ante el cual se siguió la causa instaurada en su contra, sino que
se trata de medidas emanadas de facultades atribuidas a las autoridades administrativas encargadas de él. En
congruencia con lo anterior, se concluye que la competencia para conocer del juicio de amparo en el que se
reclaman medidas inherentes a la organización y/o control de dicho centro, como lo son las órdenes emitidas
por la autoridad administrativa para trasladar a un interno de una celda a otra o para cambiarlo a un área
diferente, dentro del mismo centro penitenciario, se surte a favor de los juzgados de Distrito en materia
administrativa, sin que ello exima a la autoridad jurisdiccional a suplir la queja deficiente en términos del
artículo 76 Bis, fracción II, de la Ley de Amparo, si al impugnar los actos mencionados el peticionario de
garantías está privado de su libertad.

Contradicción de tesis 2/2008-PS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Segundo y Tercero,
ambos en Materia Penal del Primer Circuito. 2 de abril de 2008. Cinco votos. Ponente: Olga Sánchez Cordero
de García Villegas. Secretaria: Rosalía Argumosa López.

Tesis de jurisprudencia 43/2008. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
nueve de abril de dos mil ocho.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

10. En la Ley Federal del Trabajo se prevén las tercerías excluyentes de dominio y las de preferencia de
crédito. Ahora bien, las resoluciones en las que se decide el fondo de dichas tercerías son impugnables
mediante:

A. El juicio de amparo indirecto, por tratarse de actos fuera de juicio.


B. El juicio de amparo directo.
C. El juicio de amparo indirecto, por tratarse de actos dentro de juicio que tienen una ejecución
irreparable.

Justificación:

Registro No. 176797


Localización:
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXII, Octubre de 2005
Página: 952
Tesis: 2a./J. 126/2005
Jurisprudencia
Materia(s): laboral

TERCERÍAS EXCLUYENTES DE DOMINIO O DE PREFERENCIA DE CRÉDITO EN MATERIA


LABORAL. TIENEN NATURALEZA DE JUICIO Y NO DE INCIDENTE, POR LO QUE LA
SENTENCIA QUE LAS RESUELVE ES IMPUGNABLE EN AMPARO DIRECTO. De los artículos
976, 977 y 978 de la Ley Federal del Trabajo se advierte que las tercerías excluyentes de dominio o de
preferencia, tanto material como formalmente, tienen la naturaleza de juicio y no de incidente, pese a que el
segundo de los preceptos citados establezca que se tramitarán en forma incidental, pues esta mención sólo se
refiere a la forma procesal, pero no a su naturaleza sustancial, toda vez que mientras el incidente resuelve
generalmente cuestiones de carácter adjetivo, la tercería decide un aspecto sustantivo (la propiedad del bien
embargado o la preferencia del crédito reclamado), ajeno a la cuestión ventilada en el juicio del que surge, lo
que materialmente le da la calidad de un juicio con sustantividad propia. Además, el tercero es ajeno a la
controversia principal y al ejercer la nueva acción debe acreditar un interés propio y distinto al de quienes son
parte en aquélla; la nueva acción se ventila por cuerda separada a través de un procedimiento singular en el
que el tercerista tiene los derechos, cargas y obligaciones que en todo juicio tienen las partes, y no suspende el
curso del juicio preexistente, lo que evidencia que las tercerías excluyentes son formalmente juicios y, por
ende, que las resoluciones que las deciden en cuanto al fondo, por tratarse de sentencias definitivas, son
impugnables en amparo directo, en términos de los artículos 44, 46 y 158 de la Ley de Amparo.

Contradicción de tesis 106/2005-SS. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal Colegiado del Décimo Sexto
Circuito, Primer Tribunal Colegiado del Sexto Circuito y Primer Tribunal Colegiado del Segundo Circuito. 19
de agosto de 2005. Cinco votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretario: Eduardo Delgado
Durán.

Tesis de jurisprudencia 126/2005. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintitrés de septiembre de dos mil cinco.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

11. En un juicio laboral el trabajador demandó la reinstalación en su puesto de trabajo y otras


prestaciones derivadas del servicio que le prestó al demandado. El patrón promovió incidente de
insumisión al arbitraje, a efecto de no reinstalar al trabajador, alegando que éste tenía un puesto de
confianza. La junta dictó interlocutoria en la que resolvió que la parte demandada acreditó la
procedencia del incidente de insumisión al arbitraje, debido a que demostró que el actor tenía el
carácter de trabajador de confianza y, como consecuencia, se condenó al patrón al pago de las
indemnizaciones derivadas de la insumisión al arbitraje. En esa misma resolución incidental, la junta
ordenó que continuara el juicio en su etapa arbitral por lo que ve al resto de las prestaciones
reclamadas por el actor. Dicha resolución incidental es impugnable:

A. Como violación procesal en el amparo directo que se promueva contra el laudo en el que se resuelva
sobre las prestaciones distintas de la reinstalación.
B. De inmediato, en amparo directo, en virtud de que se trata de una resolución que dirimió la contienda
en lo principal por lo que se refiere a una de las prestaciones reclamadas.
C. En amparo indirecto, por tratarse de un acto de ejecución irreparable.

Justificación:

Registro No. 172495


Localización:
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXV, Mayo de 2007
Página: 930
Tesis: 2a./J. 86/2007
Jurisprudencia
Materia(s): laboral

INSUMISIÓN AL ARBITRAJE LABORAL. CONTRA LA INTERLOCUTORIA QUE DECLARA


PROCEDENTE EL INCIDENTE RELATIVO Y ORDENA LA CONTINUACIÓN DEL JUICIO EN
SU ETAPA ARBITRAL, POR LO QUE HACE A LAS PRESTACIONES QUE NO FUERON
MATERIA DE LA LITIS INCIDENTAL, PROCEDE EL AMPARO INDIRECTO. La interlocutoria
que declara procedente el incidente de insumisión al arbitraje, exime al patrón de reinstalar al trabajador y
condena al pago de las prestaciones inherentes a la reinstalación es reclamable en el amparo indirecto, en
términos del artículo 114, fracción IV, de la Ley de Amparo, porque afecta el derecho sustantivo del quejoso a
la estabilidad en el empleo y este aspecto ya no será materia de estudio en el laudo, por lo que aun cuando
obtuviera un fallo favorable respecto de las restantes prestaciones materia de la litis en la etapa arbitral, no se
le podría restituir en el goce de ese derecho sustantivo afectado, y porque, afecta al trabajador en grado
predominante o superior, ya que al ordenar la tramitación de la etapa arbitral en el juicio laboral, cuyo laudo
decidirá las prestaciones derivadas de la reinstalación que no fueron materia de la litis incidental pero que sí
se rigen por el sentido de ésta, sujeta al afectado a un juicio que puede ser ocioso si en el correspondiente
amparo se determina la inconstitucionalidad de la interlocutoria reclamada, pues su efecto sería la reposición
del procedimiento para que la reinstalación se decida en la etapa arbitral.

Contradicción de tesis 195/2006-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Décimo Primero,
Octavo, Cuarto y Noveno, todos en Materia de Trabajo del Primer Circuito. 18 de abril de 2007. Unanimidad
de cuatro votos. Ponente: Mariano Azuela Güitrón; en su ausencia hizo suyo el asunto Margarita Beatriz Luna
Ramos. Secretaria: Oliva del Socorro Escudero Contreras.

Tesis de jurisprudencia 86/2007. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veinticinco de abril de dos mil siete.

11
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

12. Conforme al artículo 124 bis de la Ley de Amparo, a efecto de que proceda la suspensión, contra
actos derivados de un procedimiento penal que afecten la libertad personal, el juez de amparo deberá
exigir al quejoso que exhiba garantía, tomando en cuenta los siguientes elementos:

A. La naturaleza, modalidades y características del delito que se impute al quejoso; su situación


económica; y la posibilidad de que éste se sustraiga a la acción de la justicia.
B. La naturaleza, modalidades y características del delito que se impute al quejoso; su situación
económica, sus usos y costumbres; y la posibilidad de que éste se sustraiga a la acción de la justicia.
C. La naturaleza, modalidades y características del delito que se impute al quejoso; su situación
económica, su grado de escolaridad; y la posibilidad de que éste se sustraiga a la acción de la justicia.

Justificación:

Artículo 124 bis de la Ley de Amparo.

Para la procedencia de la suspensión contra actos derivados de un procedimiento penal que afecten la libertad
personal, el juez de amparo deberá exigir al quejoso que exhiba garantía, sin perjuicio de las medidas de
aseguramiento que estime convenientes.- El juez de amparo fijará el monto de la garantía, tomando en cuenta
los elementos siguientes:- I. La naturaleza, modalidades y características del delito que se impute al quejoso;
II. La situación económica del quejoso, y III. La posibilidad de que el quejoso se sustraiga a la acción de la
justicia.

12
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

13. Una persona desea presentar demanda de amparo indirecto en contra de una resolución dictada
dentro de un juicio reivindicatorio. En virtud de que es el último día que dicha persona tiene para
presentar su demanda de garantías, se traslada al domicilio del secretario del juzgado de Distrito que
ha sido autorizado por el juez para recibir promociones fuera del horario de labores. Para estimar
válida la razón que se levante con motivo de la recepción de la demanda, es necesario que el secretario
asiente los siguientes requisitos:

A. La fecha y hora de recepción del escrito, los anexos y copias que, en su caso, le sean entregados, su
firma al calce para debida constancia y el órgano donde labora, sin que sea necesario que asiente otros
datos como el lugar de recepción, su nombre y la clase de nombramiento que tiene.
B. La fecha y hora de recepción del escrito, los anexos y copias que, en su caso, le sean entregados, su
firma al calce para debida constancia, lugar de recepción y el órgano donde labora, sin que sea
necesario que asiente otros datos como su nombre y la clase de nombramiento que tiene.
C. La fecha y hora de recepción del escrito, que asiente los anexos y copias que, en su caso, le sean
entregadas y su firma al calce para debida constancia, sin que sea necesario que asiente otros datos
como el lugar de recepción, su nombre, la clase de nombramiento que tiene y el órgano donde labora.

Justificación: No. Registro: 189975. Novena Época. Instancia: Pleno. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta. XIII, Abril de 2001. Página: 80. Tesis: P./J. 33/2001. Jurisprudencia. Materia(s):
Común

DEMANDAS O PROMOCIONES PRESENTADAS EN HORAS INHÁBILES. REQUISITOS QUE DEBE


CONTENER LA RAZÓN QUE RESPECTO A SU RECEPCIÓN ASIENTE EL SECRETARIO DEL
JUZGADO DE DISTRITO AUTORIZADO POR EL TITULAR DEL ÓRGANO JURISDICCIONAL
RESPECTIVO. Si se toma en consideración que conforme a lo dispuesto en los artículos 23, cuarto párrafo,
de la Ley de Amparo y 61 del Código Federal de Procedimientos Civiles, de aplicación supletoria a la citada
ley, en términos de lo previsto en el artículo 2o. de ésta, la presentación de demandas o promociones de
término puede hacerse el día en que el plazo relativo concluya, fuera del horario de labores del órgano
jurisdiccional correspondiente, ante el secretario autorizado para recibirlas, quien tiene la obligación de
autorizar con su firma todos los actos procesales de los que deba dejarse constancia y le estén encomendados,
así como hacer constar la fecha (día, mes y año) y la hora en que se presente el escrito, dando cuenta con él al
día siguiente, o bien, desde luego, cuando se trate de un asunto urgente, es inconcuso que para que la razón
que al respecto asiente el referido secretario sea válida, basta con que en ella se señalen la fecha y hora
de recepción del escrito, que se asienten los anexos y copias que, en su caso, le sean entregadas, y que el
citado funcionario firme al calce para debida constancia, sin que sea necesario asentar otros datos como
el lugar de recepción, el nombre del funcionario que recibe, la clase de nombramiento que tiene y el
órgano donde labora. Ello es así, porque si la finalidad que se persigue al permitir la presentación de
demandas o promociones el día en que concluya el plazo legal para hacerlo, fuera del horario de labores, es la
de dar oportunidad a las partes de ejercer con plenitud sus derechos, desde el primer momento en que nacen,
hasta el último minuto del plazo que la ley les otorga para ello, es incuestionable que dicho ejercicio no puede
quedar supeditado a la satisfacción de formalidades no previstas en la ley, que incluso pudieran ocasionar
graves perjuicios al promovente, pues la negligencia, desconocimiento o actuación indebida del secretario
autorizado para recibir promociones de término podría dejar a aquél en estado de indefensión, dando lugar a
que la presentación se considere extemporánea por causas ajenas a su conducta procesal.

Contradicción de tesis 5/2000. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado del Quinto Circuito y
el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del Tercer Circuito. 22 de febrero de 2001. Once votos.
Ponente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia. Secretaria: Ma. Dolores Omaña Ramírez.

13
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

14. Una autoridad señalada como responsable en un juicio de amparo indirecto es designada para que
represente al Presidente de la República en el mismo juicio constitucional. En este supuesto, ¿qué
ordenamiento debe señalar los funcionarios que podrán suplir a la autoridad que represente al Titular
del Ejecutivo en el referido juicio?

A. La Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación.


B. El reglamento interior que se expida conforme a la ley orgánica respectiva.
C. La Ley de Amparo y los acuerdos generales que al efecto se emitan.

Justificación:

Ley de Amparo

"Artículo 19. (…)

Las autoridades podrán ser suplidas por los funcionarios a quienes otorguen esa atribución los
reglamentos interiores que se expidan conforme a las leyes orgánicas respectivas.”

14
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

15. Se promueve un juicio de amparo indirecto en contra de una ley secundaria. Del estudio del
expediente se advierte que ésta se aplicó en perjuicio del quejoso y que su inconstitucionalidad la hace
derivar en que dicha ley es contradictoria con otra de igual jerarquía y con ello vulnera la garantía de
seguridad jurídica, en específico, la sub-garantía de competencia, al no respetarse lo dispuesto en la
Carta Magna (lo cual es cierto). En este caso, el juez federal debe:

A. Sobreseer en el juicio de amparo, ya que éste es improcedente para impugnar una ley con motivo de
que es contradictoria con otra de igual jerarquía.
B. Negar el amparo, ya que con independencia de que la ley impugnada sea contradictoria con otra de
igual jerarquía, ello no da lugar a que resulte inconstitucional.
C. Conceder el amparo, ya que la ley secundaria es inconstitucional. Lo anterior, porque quedó
demostrado que es contradictoria con otra de igual jerarquía, viola la garantía de seguridad jurídica
(sub-garantía de competencia), lo que implica la vulneración indirecta al texto constitucional, así
como su acto de aplicación en perjuicio del quejoso.

Justificación:

Registro No. 161139, Novena Época, Instancia: Primera Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta, XXXIV, Septiembre de 2011, Página: 50, Tesis: 1a./J. 104/2011, Jurisprudencia, Materia(s):
Común

AMPARO CONTRA LEYES. LA INCONSTITUCIONALIDAD DE ÉSTAS PUEDE DERIVAR DE


LA CONTRADICCIÓN CON OTRAS DE IGUAL JERARQUÍA, CUANDO SE DEMUESTRE
VIOLACIÓN A LA GARANTÍA DE SEGURIDAD JURÍDICA. Los actos de autoridad de creación y
vigencia de normas generales pueden combatirse en el juicio de garantías, con base en la infracción de
exigencias que deben respetar, como las derivadas del proceso legislativo establecidas en la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, o incluso aquellas derivadas del respeto a la garantía de seguridad
jurídica que comprende las denominadas sub-garantías de legalidad, fundamentación, motivación,
competencia, irretroactividad y audiencia, cuya violación puede demostrarse no sólo a través de la exposición
de una contradicción directa con el texto fundamental, sino mediante las incongruencias en el orden jurídico
que revelen transgresión a esa garantía, como la contradicción entre normas secundarias, lo que implica
vulneración indirecta al texto constitucional, sin embargo, en este último supuesto, el examen de las normas
jurídicas relativas debe sustentarse no únicamente en afirmaciones tocantes a la incongruencia entre
leyes secundarias, sino también en la precisión de las garantías individuales violadas, y en la
demostración de que la norma aplicada es la que viola el orden constitucional y no exclusivamente el
ordenamiento jurídico utilizado como parámetro comparativo para derivar la incongruencia o carencia de
facultades, pues sólo de esa manera se podría demostrar que se aplicó en el acto reclamado una ley
inconstitucional, de otra manera, por más inconstitucional que resultara la norma comparativa no aplicada, no
podría concederse la protección federal.

Precedentes: Amparo directo en revisión 1948/2009. Rafael Arnaldo Ortega Esquivel. 25 de noviembre de
2009. Cinco votos. Ponente: Sergio A. Valls Hernández. Secretario: José Álvaro Vargas Ornelas.

Amparo directo en revisión 455/2010. José Antonio Grijalva Varela. 9 de junio de 2010. Cinco votos.
Ponente: Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Secretario: Carlos Enrique Mendoza Ponce.

Amparo directo en revisión 809/2010. Ferretera y Materiales de Zamora, S.A de C.V. 23 de junio de 2010.
Cinco votos. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretario: Rogelio Alberto Montoya Rodríguez.

Amparo en revisión 814/2010. Altiora Semper, S.A. de C.V. y otras. 1o. de diciembre de 2010. Unanimidad
de cuatro votos. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretario: Juan Carlos Roa Jacobo.

Amparo en revisión 133/2011. Elfus de México, S.A. de C.V. 13 de abril de 2011. Cinco votos. Ponente:
Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Hugo Alberto Macías Beraud.

Tesis de jurisprudencia 104/2011. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada de
veinticuatro de agosto de dos mil once.

15
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

16. Lea el párrafo cuarto del artículo 21 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y,
enseguida, dé respuesta al planteamiento que se le formula: "Artículo 21. ... Las resoluciones del
Ministerio Público sobre el no ejercicio y desistimiento de la acción penal, podrán ser impugnadas por vía
jurisdiccional en los términos que establezca la ley."

Ahora bien, diga en qué casos la víctima del delito está legitimada para promover el juicio de amparo
indirecto en contra de la determinación del Ministerio Público sobre el no ejercicio de la acción penal.

A. En ninguno caso.
B. Únicamente en el caso de que el delito por el cual se pretenda realizar el ejercicio de la acción penal
sea considerado como grave por la ley de la materia.
C. En todos los casos mientras no se establezca en ley la vía jurisdiccional de impugnación ordinaria,
para reclamar la resoluciones sobre el no ejercicio o desistimiento de la acción penal, en virtud de que
la determinación de la representación social, en ese sentido, puede ser violatorio de garantías.

Justificación:

No. de registro: 190963. Novena Época. Instancia: Pleno. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta. XII, Octubre de 2000. Página: 5. Tesisi: P./J.114/2000. Jurisprudencia

ACCIÓN PENAL. ES PROCEDENTE EL JUICIO DE AMPARO, MIENTRAS NO SE


ESTABLEZCA EN LEY LA VÍA JURISDICCIONAL DE IMPUGNACIÓN ORDINARIA, PARA
RECLAMAR LAS RESOLUCIONES SOBRE EL NO EJERCICIO O DESISTIMIENTO DE
AQUÉLLA (ARTÍCULO 21, PÁRRAFO CUARTO, DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL).-De la
reforma al citado precepto constitucional, que entró en vigor el 1o. de enero de 1995, y de los antecedentes
legislativos que le dieron origen, se advierte el reconocimiento en favor del querellante, denunciante, víctima
del delito o de los familiares de ésta o del legalmente interesado, del derecho de impugnar las resoluciones del
Ministerio Público sobre el no ejercicio o desistimiento de la acción penal, coetáneo del derecho de exigir al
Estado la persecución de los delitos, lo que se traduce en el nacimiento de una garantía individual, cuyo
respeto no puede considerarse postergado o sujeto a la condición suspensiva de que el legislador ordinario, en
los diferentes fueros, emita las disposiciones legales que reglamenten el instrumento para impugnar por la vía
jurisdiccional ordinaria las determinaciones de mérito, puesto que, en principio, ante la vigencia de la
disposición constitucional relativa, la protección del derecho garantizado es inmediata, ya que, en tal
hipótesis, no se requieren medios materiales o legales diferentes de los existentes para que la autoridad
cumpla cabalmente y desde luego, con el mandato constitucional de investigar y perseguir los delitos, siendo
obvio que dentro del sistema constitucional mexicano, el medio para controlar directamente el cumplimiento
de esas funciones es el juicio de amparo. Por consiguiente, la ausencia de ordenamientos legales que precisen
la vía jurisdiccional ordinaria para impugnar las resoluciones del Ministerio Público sobre el no ejercicio y
desistimiento de la acción penal que pueden ser violatorias de las garantías individuales del ofendido, no
impide que tales determinaciones sean reclamadas de modo inmediato y en tanto se expidan las leyes
ordinarias, a través del juicio de amparo, dado que al estar regulada la actuación relativa de la representación
social por la propia Carta Magna, entre otros de sus preceptos, en los artículos 14 y 16, bien puede y debe
examinarse esa actuación en el juicio de garantías, pues arribar a una postura que sobre el particular impida la
procedencia de dicho juicio, sería tanto como desconocer la existencia de la mencionada garantía individual y
el objetivo y principios que rigen al juicio de amparo, que de acuerdo con lo previsto en los artículos 103 y
107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, es procedente contra leyes o actos de
autoridad que violen garantías individuales. En estas condiciones, debe concluirse que si las determinaciones
del aludido representante social sobre el no ejercicio o desistimiento de la acción penal pueden implicar la
violación de garantías individuales, aquéllas podrán impugnarse mediante el juicio de amparo indirecto, en
términos de lo dispuesto en el artículo 114, fracción II, de la Ley de Amparo, por ser esta vía la que revisa la
legalidad del proceso indagatorio de la comisión de ilícitos, además de que desatender la norma constitucional
reformada implicaría la inobservancia de los artículos 133 y 136 de la Constitución Federal, siendo que el
espíritu del Constituyente Originario se orientó a la prevalencia de los principios de supremacía e
inviolabilidad de la Ley Fundamental.

Contradicción de tesis 18/98-PL. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Tercero del
Cuarto Circuito. 5 de junio de 2000. Unanimidad de diez votos. Ausente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia.
Ponente: Juventino V. Castro y Castro. Secretario: Hilario Sánchez Cortés.

El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada hoy dos de octubre en curso, aprobó, con el número
114/2000, la tesis jurisprudencial que antecede. México, Distrito Federal, a dos de octubre de dos mil.

16
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

17. Un agente de la policía estatal promueve juicio de amparo en contra de la orden de la autoridad
administrativa en el sentido de cambiarlo de la adscripción en que desempeña su función. Dicha orden
sólo implica el cambio de sede, mas no de funciones ni condiciones en que desempeña el servicio (rango,
categoría, sueldo, horario). Asimismo, cabe precisar que ni en la ley estatal ni en el reglamento
correspondiente se prevé algún derecho de los agentes policíacos para permanecer en una sola sede.
Ahora bien, en este caso debe considerarse que la orden reclamada:

A. Afecta el interés jurídico del quejoso.


B. No afecta el interés jurídico del quejoso.
C. No es posible determinar si esa orden afecta el interés jurídico del quejoso, porque eso implica un
estudio del fondo del asunto.

Justificación:

No. Registro: 178883


Jurisprudencia
Materia(s): Administrativa
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXI, Marzo de 2005
Tesis: 2a./J. 38/2005
Página: 310

SEGURIDAD PÚBLICA. CAMBIO DE ADSCRIPCIÓN. NO AFECTA EL INTERÉS JURÍDICO DEL


AGENTE PERTENECIENTE A LA DIRECCIÓN GENERAL DE SEGURIDAD PÚBLICA Y TRÁNSITO
DEL ESTADO DE MÉXICO, CUANDO SE REALIZA EN IGUALDAD DE FUNCIONES Y
CONDICIONES. La orden emitida por el Director General de Seguridad Pública y Tránsito del Estado de
México, en el sentido de cambiar de adscripción, por necesidades del servicio, a un integrante del cuerpo
preventivo estatal de seguridad pública, conforme a las facultades que le confiere el artículo 13, fracción VII,
de la Ley de Seguridad Pública Preventiva del Estado de México, no afecta los intereses jurídicos del agente
readscrito, siempre y cuando, en razón de dicha nueva adscripción, continúe desempeñando las mismas
funciones y en igualdad de condiciones, atento a que no se trata de una orden de remoción o destitución, o
bien, cualquiera otra de separación del cargo, sin que en el caso, el agente policíaco tenga la titularidad del
derecho a permanecer en la sede a que fue destinado, puesto que dicho derecho no se advierte a su favor ni en
la propia Ley de Seguridad Pública Preventiva del Estado de México, ni en su reglamento.

Contradicción de tesis 187/2004-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Segundo y Tercero,
ambos en Materia Administrativa del Segundo Circuito. 18 de febrero de 2005. Cinco votos. Ponente:
Margarita Beatriz Luna Ramos. Secretario: Roberto Martín Cordero Carrera.

Tesis de jurisprudencia 38/2005. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
once de marzo de dos mil cinco.

17
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

18. La omisión del juez del proceso de decretar de oficio careos procesales cuando existen
contradicciones sustanciales en el dicho de dos personas:

A. Es impugnable en amparo directo, en caso de trascender al resultado del fallo.


B. Es impugnable en amparo indirecto.
C. Es impugnable indistintamente en cualquiera de las dos vías.

Justificación:

Registro: 185435
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XVI, Diciembre de 2002
Materia(s): Penal. Tesis: 1a./J. 50/2002. Página: 19

CAREOS PROCESALES. EL JUZGADOR DEBE ORDENAR SU DESAHOGO DE OFICIO,


CUANDO ADVIERTA LA EXISTENCIA DE CONTRADICCIONES SUSTANCIALES EN EL
DICHO DE DOS PERSONAS, POR LO QUE LA OMISIÓN DE DESAHOGARLOS CONSTITUYE
UNA VIOLACIÓN AL PROCEDIMIENTO QUE AMERITA SU REPOSICIÓN, EN CASO DE
TRASCENDER AL RESULTADO DEL FALLO. El artículo 265 del Código Federal de Procedimientos
Penales establece que con excepción de los careos constitucionales a que se refiere el artículo 20, apartado A,
fracción IV, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, cuya práctica es a petición de parte,
el Juez de la causa, ante la existencia de contradicciones sustanciales en el dicho de dos personas, debe
ordenar el desahogo de careos procesales e incluso, puede ordenar su repetición cuando lo estime oportuno o
cuando surjan nuevos puntos de contradicción. Ahora bien, del análisis gramatical y sistemático del referido
artículo 265, en relación con el dispositivo 150 del código mencionado, se concluye que el desahogo de los
careos procesales debe ordenarse de oficio y no a petición de parte, siempre que el juzgador advierta la
discrepancia sustancial en el dicho de dos personas, cuyo esclarecimiento conduzca a encontrar la verdad real,
lo cual es en beneficio del reo, pues no tendría objeto ordenar su práctica, si no constituye aportación alguna
al proceso. Con la anterior conclusión no se imponen obstáculos a la celeridad del procedimiento penal
federal, pues ello iría en contra de los motivos que llevaron al legislador a reformar la fracción IV del
apartado A del indicado artículo constitucional, sino que se busca que los procesados tengan garantizada la
mayor posibilidad de defensa, a fin de que no quede pendiente de dilucidar alguna contradicción sustancial en
el dicho de dos personas que pudiera beneficiarles al dictarse la sentencia definitiva, la cual, por descuido,
negligencia o alguna otra razón, puede pasar desapercibida por el propio procesado o su defensor, incluso, por
el juzgador de primera y segunda instancias, lo que implica que quedaría al Tribunal Colegiado de Circuito,
como órgano terminal de legalidad, la facultad de apreciar las declaraciones y, en su caso, conceder el
amparo, ordenando el desahogo de esos careos, lo cual no sería posible si se considerara la necesidad de
haberlos ofrecido como prueba, con la consecuente indefensión del reo. En conclusión, si el desahogo de los
careos procesales no se lleva a cabo en los términos precisados, ello constituye una violación al
procedimiento, que amerita su reposición en caso de trascender al resultado del fallo, la cual se ubica, en
forma análoga, en la fracción III del artículo 160 de la Ley de Amparo.

Contradicción de tesis 108/2001-PS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado del Décimo
Segundo Circuito, por el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito y por el Tribunal
Colegiado en Materia Penal del Séptimo Circuito. 3 de julio de 2002. Cinco votos. Ponente: Juventino V.
Castro y Castro. Secretario: Hilario Sánchez Cortés.

Tesis de jurisprudencia 50/2002. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de tres de
julio de dos mil dos, por unanimidad de cinco votos de los señores Ministros: presidente Juan N. Silva Meza,
Juventino V. Castro y Castro, Humberto Román Palacios, José de Jesús Gudiño Pelayo y Olga Sánchez
Cordero de García Villegas.

18
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

19. En conformidad con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ¿en qué supuestos
procede la resolución prioritaria de los juicios de amparo?

A. En todos los casos en que se alegue la inconstitucionalidad de una ley federal.


B. En todos los casos en los que lo solicite el Ejecutivo Federal y la Federación sea parte en el juicio de
donde deriva el acto reclamado.
C. Cuando lo solicite alguna de las Cámaras del Congreso de la Unión o el Ejecutivo Federal, y
justifique la urgencia, atendiendo al interés social o al orden público.

Justificación:

Artículo 94, párrafo noveno, constitucional:

“…Los juicios de amparo, las controversias constitucionales y las acciones de inconstitucionalidad se


substanciarán y resolverán de manera prioritaria cuando alguna de las Cámaras del Congreso, a través de su
presidente, o el Ejecutivo Federal, por conducto del consejero jurídico del gobierno, justifique la urgencia
atendiendo al interés social o al orden público, en los términos de lo dispuesto por las leyes reglamentarias…”

19
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

20. Un precepto que se refiere al trámite de un recurso, previsto en un código de procedimientos civiles
de una entidad federativa, es declarado inconstitucional por la jurisprudencia de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación, debido a que vulnera derechos sustantivos del recurrente. Tal disposición se
aplica en el trámite de un juicio ordinario civil.

El afectado por la aplicación de esa disposición, podrá hacer valer la inconstitucionalidad de esa
norma:

A. Mediante el juicio de amparo indirecto, sin necesidad de agotar recurso alguno; en ese juicio tendría
que señalar como acto de aplicación el proveído correspondiente.
B. Sólo en el juicio de amparo directo que promoviera en contra de la sentencia definitiva.
C. En el juicio de amparo indirecto, una vez agotados los medios de defensa ordinarios.

Justificación: No. Registro: 176390. Jurisprudencia. Materia(s): Civil. Novena Época. Instancia: Primera
Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XXIII, Enero de 2006. Tesis: 1a./J. 168/2005.
Página: 40

AMPARO CONTRA LEYES. PROCEDE EN LA VÍA INDIRECTA CUANDO SE IMPUGNA LA


INCONSTITUCIONALIDAD DEL ARTÍCULO 693 DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS
CIVILES PARA EL DISTRITO FEDERAL, VIGENTE EN 2004, CON MOTIVO DE SU PRIMER
ACTO CONCRETO DE APLICACIÓN. Del análisis de los artículos 107, fracción VII, de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos y 114, fracción I, de la Ley de Amparo, así como de los criterios
que este Alto Tribunal ha emitido sobre el particular, se advierte que de ningún modo fijan límites para
estimar procedente el juicio de amparo indirecto contra leyes de naturaleza autoaplicativa o heteroaplicativa,
que por su sola entrada en vigor o con motivo del primer acto de aplicación causen perjuicio al quejoso,
específicamente con base en la excepción al principio de definitividad que prevé el artículo 73, fracción XII,
párrafo tercero, de dicha ley, en función de que no existe obligación de agotar, antes de acudir al amparo, los
recursos ordinarios establecidos por la ley del acto cuando se reclama su inconstitucionalidad. Por otra parte,
si con base en dicha excepción se impugna una ley desde luego en amparo indirecto, con motivo de su primer
acto concreto de aplicación, aun cuando éste se haya dictado dentro de un procedimiento de naturaleza civil,
no opera la regla contenida en el artículo 158, párrafo tercero, de la Ley de la materia, porque al acogerse el
gobernado al texto de la excepción citada, queda relevado de cumplir con el aludido principio, pudiendo
acudir al amparo inmediatamente, sin que en la especie opere la causal de improcedencia prevista en la
fracción XIII del indicado artículo 73. En tales circunstancias, procede el amparo en la vía indirecta cuando se
impugna el artículo 693 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, con motivo de su
primer acto concreto de aplicación, sin que pueda considerarse un uso indiscriminado de dicha instancia
constitucional so pretexto de combatir la inconstitucionalidad de una ley dentro de un procedimiento de
naturaleza civil, ya que si alguna de las partes decide impugnar esa norma en los términos referidos, lo hará
con bases objetivas en virtud de la declaratoria de inconstitucionalidad que pesa sobre esa disposición
procedimental vigente en 2004, por imponer una costa judicial de las prohibidas por el artículo 17 de la
Constitución Federal, conforme a la tesis de jurisprudencia 1a./J. 60/2005. Por ello que no se justificaría la
exigencia de agotar los recursos ordinarios procedentes, ya que en el caso la inconstitucionalidad de la citada
ley no podría abordarse por la autoridad ordinaria dentro del procedimiento civil respectivo, en tanto que ello
corresponde exclusivamente al Poder Judicial de la Federación.

Contradicción de tesis 57/2005-PS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Tercero, Octavo y
Décimo, todos en Materia Civil del Primer Circuito. 9 de noviembre de 2005. Unanimidad cuatro votos.
Ausente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretaria: Eunice
Sayuri Shibya Soto.- Tesis de jurisprudencia 168/2005. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal,
en sesión de fecha dieciséis de noviembre de dos mil cinco.

Nota: La tesis 1a./J. 60/2005 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Novena Época, Tomo XXII, julio de 2005, página 27, con el rubro: "APELACIÓN. EL ARTÍCULO 693
DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL DISTRITO FEDERAL, AL ESTABLECER
COMO REQUISITO PARA LA ADMISIÓN DE DICHO RECURSO LA OBLIGACIÓN DEL APELANTE
DE CUBRIR EL COSTO DE LAS COPIAS NECESARIAS PARA INTEGRAR EL TESTIMONIO
RESPECTIVO, VIOLA EL ARTÍCULO 17 DE LA CONSTITUCIÓN FEDERAL."

20
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

21. Se dicta orden de reaprehensión para dar cumplimiento a la pena de prisión impuesta en una
sentencia condenatoria ejecutoriada, respecto de la cual ya se agotó el juicio de amparo directo (en el
que se negó la protección de la justicia federal). El sentenciado promueve amparo indirecto en contra
esa orden de reaprehensión. En este supuesto.

A. El juicio de amparo resulta procedente.


B. El juicio de amparo es improcedente, porque el quejoso debió impugnar la orden de reaprehensión a
través del recurso de queja por exceso en el cumplimiento de la sentencia de amparo directo.
C. El juicio de amparo es improcedente, porque la orden de reaprehensión es la consecuencia legal
necesaria de la sentencia condenatoria que quedó firme al haberse negado el amparo promovido en su
contra.

Justificación:

Registro No. 166345. Novena Época.


Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXX, Septiembre de 2009
Página: 258
Tesis: 1a./J. 55/2009
Jurisprudencia. Materia(s): Penal

ORDEN DE REAPREHENSIÓN DICTADA EN EJECUCIÓN DE UNA SENTENCIA


CONDENATORIA. EL JUICIO DE AMPARO INDIRECTO ES PROCEDENTE EN SU CONTRA.
La orden de reaprehensión girada con motivo de una sentencia condenatoria ejecutoriada respecto de la cual
ya se agotó el juicio de amparo directo, es susceptible de ser impugnada vía amparo indirecto. Se está ante un
acto que se ajusta con lo previsto por el artículo 114 fracción III, primer párrafo de la Ley de Amparo, pues
emana de un tribunal judicial y es ejecutado después de que concluye el juicio. Ahora bien, en el supuesto
descrito, no cobra vigencia la hipótesis normativa prevista por el segundo párrafo del artículo citado,
conforme a la cual tratándose de actos de ejecución de sentencia, el amparo sólo es procedente contra la
última resolución dictada en el procedimiento respectivo. Esto, en virtud de que la orden de reaprehensión
es un acto necesario para el cumplimiento de la pena de prisión impuesta en un juicio penal, la cual no
supone un procedimiento especial de ejecución posterior al dictado de la sentencia misma. Es decir, para
hacer efectiva la pena de prisión, que ya ha sido impuesta en sentencia ejecutoriada, basta con el libramiento
de la orden de reaprehensión respectiva para que el sujeto sea detenido e ingresado a centro de reclusión con
el objeto de cumplir con la sanción. Ahora bien, en virtud del tratamiento especial que recibe la afectación de
la libertad personal en el juicio de amparo, debe entenderse que se está ante una excepción a la regla
prevista en la fracción III antes aludida del artículo 114. De una interpretación sistemática de los artículos 103
y 107 constitucionales, 17, 22, 23, 37 y 117 de la Ley de Amparo, se advierte que las medidas que afectan
este derecho se distinguen por estar altamente sujetas al control del juicio de amparo y recibir una mayor
protección. Estimar que no existe excepción implicaría exigir al particular que espere a que la posible
violación (privación ilegal de la libertad) se consume de manera irreparable, para estar en posibilidad de
acudir al amparo. Debe agregarse que es posible el que, en los hechos, la orden de reaprehensión sea
desplegada en una forma contraria a la establecida por la sentencia misma. Esto es, si bien la orden de
reaprehensión se justifica por ser consecuencia de la sentencia que permite afectar la libertad personal,
también debe reunir ciertos requisitos para su legal emisión. Es decir, debe estar debidamente fundada y
motivada. Por tanto, la orden de reaprehensión es susceptible de poseer, en si misma, vicios propios. La
posibilidad de que exista un vicio como tal, es lo que hace necesaria la procedencia del amparo
indirecto; máxime cuando el derecho que está en juego es precisamente la libertad. De manera específica
resulta adecuada la aplicación del principio llamado in dubio pro actione, el cual debe entenderse en el sentido
que en caso de duda, se debe favorecer la interpretación que mejor asegure el acceso a la justicia, buscando de
esa manera, que la persona pueda acceder a los mecanismos de tutela de sus derechos; a saber: el juicio de
amparo.

Contradicción de tesis 74/2009. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Segundo,
ambos en Materia Penal del Sexto Circuito. 29 de abril de 2009. Cinco votos. Ponente: José Ramón Cossío
Díaz. Secretario: Miguel Enrique Sánchez Frías.

Tesis de jurisprudencia 55/2009. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha trece
de mayo de dos mil nueve.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

22. El juicio de amparo indirecto que promueve el trabajador en contra de la determinación de la junta
que niega la admisión de la prueba pericial contable que ofreció en relación con la contabilidad de su
contraparte:

A. Es procedente.
B. Resulta improcedente.
C. Sólo es procedente cuando el objeto de la prueba sea acreditar que el patrón adeuda diversas
prestaciones al actor.

Justificación:

No. Registro: 175524


Jurisprudencia
Materia(s): Común
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: XXIII, Marzo de 2006
Tesis: 2a./J. 24/2006. Página: 297

PERICIAL CONTABLE OFRECIDA POR EL QUEJOSO EN LA CONTABILIDAD DE SU


CONTRAPARTE EN EL JUICIO NATURAL. CONTRA SU DESECHAMIENTO ES
IMPROCEDENTE EL AMPARO INDIRECTO. Conforme a los artículos 107, fracción III, inciso b), de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 114, fracción IV, de la Ley de Amparo, los actos
dictados durante el juicio sólo pueden impugnarse en amparo indirecto cuando tengan una ejecución de
imposible reparación. Por otra parte, el Tribunal en Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la
tesis P. LVII/2004, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo
XX, octubre de 2004, página 9, con el rubro: "ACTOS DE EJECUCIÓN IRREPARABLE. CRITERIOS
PARA DETERMINAR LA PROCEDENCIA O IMPROCEDENCIA DEL JUICIO DE AMPARO
INDIRECTO.", sostuvo que los actos dentro del juicio tienen una ejecución de imposible reparación cuando
sus consecuencias afectan de manera directa e inmediata alguno de los derechos sustantivos previstos en la
Constitución Federal o producen a las partes una afectación en grado predominante o superior. En
congruencia con lo anterior, se concluye que el amparo indirecto es improcedente contra el desechamiento de
la prueba pericial contable ofrecida por el quejoso sobre la contabilidad de su contraparte en el juicio natural,
por tratarse de un acto procesal que no tiene una ejecución de imposible reparación, pues sus consecuencias
no afectan de manera cierta e inmediata alguno de sus derechos sustantivos, ni producen una afectación a las
partes en el juicio en grado predominante o superior, ya que sólo ocasiona que no se acumulen al acervo
probatorio de ese juicio los resultados que pudiera arrojar el desahogo de la prueba respectiva, lo cual afecta
únicamente derechos adjetivos que pueden repararse, pues si el oferente obtiene sentencia favorable, la
violación no trascendería al resultado del fallo en su perjuicio, y si le fuera desfavorable, podría reclamarla en
amparo directo en términos de la fracción III del artículo 159 de la Ley de la materia, haciendo valer el
desechamiento como violación procesal, en su caso.

Contradicción de tesis 44/2005-PL. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Octavo en Materia
Civil del Primer Circuito y Segundo en Materia de Trabajo del Cuarto Circuito. 24 de febrero de 2006. Cinco
votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: María Estela Ferrer Mac-Gregor Poisot.

Tesis de jurisprudencia 24/2006. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
primero de marzo de dos mil seis.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

23. ¿Procede la suspensión contra resoluciones que ordenan la reposición del procedimiento en el juicio
natural, en el que existía sentencia definitiva sobre el fondo del litigio?

A. Sólo es procedente cuando la reposición del procedimiento esté motivada por una cuestión de
competencia.
B. Es improcedente, porque de otorgarse implicaría la suspensión del procedimiento, cuya prosecución
es de orden público.
C. Es procedente.

Justificación:

No. Registro: 2000472


Jurisprudencia
Materia(s): Común
Décima Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: Libro VI, Marzo de 2012, Tomo 1
Tesis: 1a./J. 21/2011 (10a.)
Página: 205

SUSPENSIÓN DEL ACTO RECLAMADO. PROCEDE OTORGARLA RESPECTO DE LOS


JUICIOS EN QUE SE DECRETA LA REPOSICIÓN DEL PROCEDIMIENTO. Suspender el
procedimiento implica interrumpir el desarrollo del juicio en cuanto a sus etapas procesales e impedir el
dictado de la sentencia con que se decida la controversia de que se trate. En cambio, suspender la reposición
del procedimiento significa detener la ejecución de una resolución que ha invalidado un juicio concluido en
todas sus etapas procesales, en el que posiblemente se ha dictado sentencia de fondo. Por tanto, conforme a
los artículos 124 y 138 de la Ley de Amparo, debe concederse la suspensión del acto reclamado, a
consideración del juez, respecto de los juicios en que se decreta la reposición del procedimiento, ya que no se
sigue perjuicio al interés social ni se contravienen disposiciones de orden público, sino que atiende a la
preservación de la materia del amparo que implica la no modificación de cuestiones resueltas y que pueden
confirmarse en la sentencia definitiva del juicio de garantías, pues de lo contrario se obligaría a la quejosa a
litigar nuevamente con la consecuente inversión de tiempo y recursos, pudiendo ocasionar daños de difícil
reparación.

Contradicción de tesis 320/2011. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Tercero y Noveno,
ambos en Materia Civil del Primer Circuito. 9 de noviembre de 2011. La votación se dividió en dos partes:
mayoría de tres votos por lo que se refiere a la competencia. Disidente: José Ramón Cossío Díaz. Unanimidad
de cuatro votos en cuanto al fondo. Ausente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia. Ponente: Olga Sánchez Cordero
de García Villegas. Secretaria: Rocío Balderas Fernández.

Tesis de jurisprudencia 21/2011 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha treinta de noviembre de dos mil once.

23
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

24. Con motivo del desconocimiento del domicilio del tercero perjudicado dentro de un juicio de
amparo en materia agraria, el juez de Distrito ordena su emplazamiento por edictos a cargo del
quejoso que tiene el carácter de ejidatario; sin embargo, éste omite recoger y, en consecuencia, publicar
tales edictos, además de que se encuentra acreditado, en forma fehaciente, que el quejoso no puede
cubrir el gasto de la publicación de los edictos. En esas condiciones ¿cómo debe proceder el juez de
Distrito?

A. Debe ordenar la publicación de los edictos a costa del juzgado.


B. Debe solicitar al Consejo de la Judicatura Federal que absorba el gasto relacionado con la publicación
de los edictos.
C. Debe sobreseer en el juicio, al actualizarse la causal de improcedencia prevista en la fracción XVIII
del artículo 73, en relación con el artículo 5, fracción III, ambos de la Ley de Amparo.

Justificación: No. Registro: 174730. Jurisprudencia. Materia(s): Administrativa. Novena Época. Instancia:
Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XXIV, Julio de 2006. Tesis: 2a./J.
91/2006. Página: 349

EMPLAZAMIENTO POR EDICTOS AL TERCERO PERJUDICADO EN AMPARO AGRARIO. EL


INCUMPLIMIENTO DEL QUEJOSO DE RECOGERLOS Y PAGAR SU PUBLICACIÓN, NO DA
LUGAR AL SOBRESEIMIENTO. Para cumplir con lo dispuesto en el artículo 30, fracción II, de la Ley de
Amparo, en caso de que se requiera emplazar a un tercero perjudicado de quien se desconoce su domicilio, es
necesario que el juzgador agote las siguientes etapas: requerir al quejoso para que lo proporcione; de no
obtener dato cierto, requerir a las autoridades responsables para que lo señalen; en caso de no obtenerse,
iniciar un procedimiento de investigación requiriendo a autoridades de cualquier índole que pudieran
conocerlo, y si ello no arroja un resultado satisfactorio, deberá ordenarse el emplazamiento por medio de
edictos a costa del promovente del juicio. Ahora bien, derivado de tal disposición, la Segunda Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación en la jurisprudencia 2a./J. 64/2002, publicada en el Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XVI, julio de 2002, página 211, sostuvo que el
incumplimiento del quejoso de recoger los edictos, pagar su publicación y exhibirla, da lugar al
sobreseimiento en el juicio fuera de audiencia; sin embargo, este criterio no es aplicable en materia agraria,
pues resulta evidente que si la regulación específica de la materia tiene como finalidad tutelar a los núcleos de
población ejidal o comunal y a los ejidatarios y comuneros en sus derechos agrarios, así como, en su
pretensión de derechos, a quienes pertenezcan a la clase campesina, ello implica la obligación del juzgador de
considerar ciertos aspectos para la toma de decisiones; de manera que de presentarse los supuestos
mencionados hasta ordenar el emplazamiento del tercero perjudicado a través de edictos a costa del quejoso
con apercibimiento de aplicarle medidas de apremio en caso de no acatar tal decisión, y darse el caso de que
el promovente comparezca a manifestar su imposibilidad para cubrir un gasto de esa naturaleza, y tanto de su
afirmación como de los elementos que consten en autos existan indicios que confirmen tal situación, el
juzgador debe, exclusivamente en este supuesto, solicitar al Consejo de la Judicatura Federal que absorba el
gasto relacionado con la publicación de los edictos para emplazar al tercero perjudicado, pues de lo contrario
se dejaría a los sujetos a que se refiere el artículo 212 de la Ley de Amparo en estado de indefensión.

Contradicción de tesis 76/2006-SS. Entre las sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Penal
y Administrativa del Quinto Circuito y el Décimo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer
Circuito. 24 de mayo de 2006. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano.
Ponente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Secretaria: Claudia Mendoza Polanco.

Tesis de jurisprudencia 91/2006. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada de
nueve de junio de dos mil seis.

24
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

25. En un juicio ordinario mercantil, el juez dicta un proveído en el que requiere nominalmente, a un
corredor público para que proporcione determinados documentos ofrecidos por la actora, o bien,
comparezca a formular los impedimentos para dar cumplimiento a esa orden judicial. A pesar de haber
sido debidamente notificado, el corredor no atiende el requerimiento y lo impugna en el juicio de
amparo indirecto, sin agotar el recurso de apelación previsto en la legislación aplicable.
¿Es procedente el juicio de amparo?

A. No, porque el quejoso no tiene la calidad de persona extraña a juicio, al haber sido vinculado al
proceso por virtud de un mandamiento judicial que conoció y estuvo en aptitud de impugnar a través
de los recursos ordinarios y, por tanto, debe observar el principio de definitividad.
B. No, pues al margen de que el quejoso es extraño al juicio natural (al no ser parte), está legitimado
para recurrir el requerimiento dirigido en su contra, de ahí que deba agotar el recurso de apelación.
C. Sí, pues es optativo para el afectado agotar el recurso ordinario o acudir al juicio de amparo, ya que a
pesar de que con motivo del requerimiento, se crea una relación jurídica directa e inmediata de supra
a subordinación con el juez responsable, al no haber comparecido al juicio, le subsiste el carácter de
persona extraña y, por tanto, no está obligada a agotar los recursos.

Justificación:

Registro No. 160179, Décima Época, Instancia: Primera Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta, Libro VI, Marzo de 2012, Tomo 1, Página: 228, Tesis: 1a./J. 124/2011 (9a.), Jurisprudencia,
Materia(s): Común

TERCERO EXTRAÑO A JUICIO. NO PIERDE ESTE CARÁCTER LA PERSONA A QUIEN NO


SIENDO PARTE EN EL JUICIO DE ORIGEN, SE LE REQUIERE PARA QUE REALICE UNA
CONDUCTA NECESARIA PARA EL DESARROLLO DEL PROCESO, AL NO QUEDAR
VINCULADA POR ESE SOLO HECHO Y, POR TANTO, NO ESTÁ OBLIGADA A AGOTAR EL
PRINCIPIO DE DEFINITIVIDAD ANTES DE ACUDIR AL JUICIO DE AMPARO. Conforme a los
artículos 107, fracción III, inciso c), de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 114,
fracción V, de la Ley de Amparo, persona extraña es la que resulta afectada con la ejecución de un acto
jurisdiccional emitido en un juicio respecto del cual es completamente ajena, es decir, es aquella que no figura
en el juicio o en el procedimiento como parte en sentido material, y con esa calidad no tiene obligación de
agotar recursos ordinarios, pudiendo optar por la acción constitucional contra la resolución que le ocasione un
perjuicio, ya que no ha comparecido al procedimiento. En ese sentido, el mandamiento judicial dirigido a
una persona que no es parte material en el juicio de origen, en el cual se le identificó nominalmente y se le
requiere para que realice una conducta útil o necesaria para el desarrollo del proceso, si bien es cierto que crea
una relación jurídica directa e inmediata de supra a subordinación con el juez responsable, similar a la que se
produce entre el juzgador con cada una de las partes, también lo es que los terceros extraños en un juicio en
ningún caso tienen obligación de agotar recursos.

Precedentes: Contradicción de tesis 84/2011. Suscitada entre el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Sexto Circuito y el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito. 7 de septiembre de
2011. Cinco votos. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Rosalía Argumosa López.

Tesis de jurisprudencia 124/2011 (9a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha diecinueve de octubre de dos mil once.

En la ejecutoria de la que derivó la anterior tesis, se resolvió:


“…En ese orden de ideas, si en virtud de una finalidad específica, útil al proceso (la citación de un testigo, la
encomienda de una tarea al perito, la exhibición de alguna cosa o documento en el proceso, la rendición de un
informe, etcétera), la autoridad jurisdiccional dicta un mandamiento legítimo, dirigido a un gobernado distinto
a las partes, con tal acto si bien se crea una relación jurídica directa e inmediata de supra-subordinación entre
la autoridad jurisdiccional y la persona a quien se dirige el mandato, similar a la que se produce entre el
propio Juez con cada una de las partes; sin embargo, para tenerse vinculado al proceso debe concurrir al
mismo.

Es decir, el conocimiento que se tiene a través de la notificación del requerimiento es insuficiente por sí
mismo para constituir la vinculación con el proceso, pues para ello es necesario que quien fue requerido
comparezca o se apersone a éste, pues con motivo de dicho acto procesal surge la vinculación del juzgador
hacia el tercero que fue llamado en forma transitoria para intervenir en una etapa del desarrollo del proceso,
ya sea como testigo, como perito para proporcionar la información requerida, o bien, para realizar una
conducta necesaria para proseguir con el procedimiento, etcétera; de ahí que en virtud de ello sólo podrán
interponer los recursos contra las providencias que estén relacionadas con su intervención….”

25
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

26. El Código Penal Federal, en su artículo 90 establece las reglas que rigen el otorgamiento y disfrute
de los beneficios de la condena condicional. En su fracción I dice que, al dictar sentencia de condena (o
en hipótesis de la fracción X), el juez suspenderá motivadamente la ejecución de las penas, a petición de
parte o de oficio, siempre que concurran las condiciones que ahí se establecen. Por su parte, la fracción
X del propio precepto prevé que el reo puede promover un incidente ante el juez de la causa para
solicitar la condena condicional, cuando ese beneficio no se haya otorgado en la sentencia, por
inadvertencia de su parte o de los tribunales, a pesar de que reunía las condiciones y estaba en aptitud
de cumplir los requisitos ahí previstos.

En un proceso penal federal se dicta sentencia definitiva condenatoria, en la cual ni en la primera ni en


la segunda instancias existió pronunciamiento sobre el beneficio de la condena condicional. El
sentenciado solicita ese beneficio vía incidental. El juez dicta interlocutoria en el que niega la solicitud,
la cual es confirmada en apelación. ¿Cómo debe impugnarse esta última determinación?

A. En amparo directo, dentro de los quince días siguientes al en que surta efectos la notificación de la
resolución.
B. En amparo indirecto, en cualquier tiempo.
C. En amparo indirecto, dentro de los quince días siguientes al en que surta efectos la notificación de la
resolución.

Justificación:

Registro No. 160434, Décima Época, Instancia: Primera Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta, Libro IV, Enero de 2012, Tomo 3, Página: 2226, Tesis: 1a./J. 123/2011 (9a.),
Jurisprudencia, Materia(s): Común

CONDENA CONDICIONAL. CONTRA SU DENEGACIÓN EN SENTENCIA DEFINITIVA DE


SEGUNDA INSTANCIA PROCEDE EL AMPARO DIRECTO. SI ESA DENEGACIÓN SE DA EN
VÍA INCIDENTAL, PROCEDE EL AMPARO INDIRECTO (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO
90, FRACCIONES I Y X DEL CÓDIGO PENAL FEDERAL). De la interpretación gramatical y lógica
del citado precepto, se advierte que para el pronunciamiento sobre la condena condicional, el legislador previó
que el juzgador, en el ejercicio de esa facultad, determine si la otorga o no en dos momentos: a) al dictar la
sentencia de primera o de segunda instancia, ya sea a petición de parte o de oficio; y, b) mediante la vía
incidental después de dictada la sentencia de primera o de segunda instancia; oportunidad que obedece a la
inadvertencia del condenado o del tribunal. De lo anterior deriva que si en la apelación de la sentencia
definitiva se confirma la decisión del juzgador sobre tal beneficio, no es el caso de promover el incidente de
que se trata al ya existir resolución sobre ese punto. Así, la fracción X del artículo 90 del Código Penal
Federal, conforme a la cual el incidente tiene lugar por inadvertencia del sentenciado o de los tribunales, se da
cuando no hubo pronunciamiento al respecto en primera ni en segunda instancias. En consecuencia, cuando
en la sentencia definitiva de primera instancia exista pronunciamiento sobre el beneficio de la condena
condicional, procede recurrirla en la apelación, y contra la sentencia ejecutoria el acusado puede acudir al
juicio de amparo directo. En cambio, cuando el sentenciado solicita el beneficio de la condena condicional
en vía incidental, contra la resolución del juez procede apelación, pero en este caso, en contra de lo que
se resuelva en la segunda instancia, procede amparo indirecto en cualquier tiempo por tratarse de una
interlocutoria.

Precedentes: Contradicción de tesis 17/2011. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal Colegiado en
Materias Penal y de Trabajo del Séptimo Circuito y el entonces Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal
del Séptimo Circuito, actualmente Primer Tribunal Colegiado en Materias Penal y de Trabajo del mismo
circuito. 7 de septiembre de 2011. Cinco votos. Ponente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia. Secretario: Jorge
Antonio Medina Gaona.

Tesis de jurisprudencia 123/2011 (9a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha diecinueve de octubre de dos mil once.

26
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

27. Conforme al artículo 105 de la Ley de Amparo, en el supuesto de que una autoridad no cumpla lo
determinado en una ejecutoria de amparo, se le exigirá el cumplimiento por medio de su superior
jerárquico. ¿En el caso de que un jefe delegacional del gobierno del Distrito Federal no cumpla una
sentencia de amparo a qué autoridad debe dirigirse el requerimiento posterior en su carácter de
superior jerárquico?

A. Al jefe de gobierno del Distrito Federal.


B. A ninguna otra autoridad, pues los jefes delegacionales del gobierno del Distrito Federal carecen de
superior jerárquico.
C. A la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

Justificación:

No. Registro: 169324


Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVIII, Julio de 2008
Materia(s): Administrativa
Tesis: 2a./J. 108/2008
Página: 513

CUMPLIMIENTO DE SENTENCIAS DE AMPARO. PARA EFECTOS DEL PROCEDIMIENTO


PREVISTO EN EL ARTÍCULO 105 DE LA LEY DE LA MATERIA, LOS JEFES
DELEGACIONALES DEL GOBIERNO DEL DISTRITO FEDERAL NO TIENEN SUPERIOR
JERÁRQUICO. Si de los artículos 122, apartado C, bases primera, fracción V, inciso f), y tercera, fracciones
I y II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 12, fracción II, 87, tercer párrafo, 104,
105, 112 y 117 del Estatuto de Gobierno del Distrito Federal, se advierte que en esta entidad existe una
división territorial en la que se establecen órganos político-administrativos denominados genéricamente
"Delegaciones", las cuales constituyen un nivel de gobierno y cuentan con autonomía funcional y de gestión
en acciones de gobierno, así como en el ejercicio de su presupuesto, teniendo solamente la obligación de
informar al respecto al Jefe de Gobierno para efectos de la cuenta pública; que dichas Delegaciones tienen
reservado un ámbito específico de atribuciones, distinto del correspondiente a las autoridades centrales; que
sus titulares son electos en forma universal, libre, secreta y directa cada 3 años, y sólo pueden ser removidos
y, en su caso, sustituidos por el que nombre la Asamblea Legislativa, con el voto de la mayoría absoluta de
los Diputados que la integran, es indudable que los Jefes Delegacionales no están subordinados
jerárquicamente al Jefe de Gobierno, máxime que éste no tiene, en relación con aquéllos, poder de
nombramiento, nota distintiva tratándose de la administración centralizada o desconcentrada, en la que sí
existe un poder de mando atendiendo al nivel jerárquico en que se estructuran las distintas unidades o
dependencias. Por tanto, en relación con el procedimiento que para lograr el cumplimiento de las sentencias
de amparo prevé el artículo 105 de la ley de la materia, cuando las autoridades responsables a las que
corresponda realizar los actos relativos lo sean los indicados Jefes Delegacionales, el órgano jurisdiccional de
amparo no está obligado a requerir con el carácter de superior jerárquico a otras autoridades para agotar el
procedimiento relativo.

Contradicción de tesis 254/2007-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Quinto y Décimo
Sexto, ambos en Materia Administrativa del Primer Circuito. 11 de junio de 2008. Unanimidad de cuatro
votos. Ausente: Genaro David Góngora Pimentel. Ponente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Secretaria: María
Antonieta del Carmen Torpey Cervantes.

Tesis de jurisprudencia 108/2008. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
dos de julio de dos mil ocho.

27
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

28. De acuerdo con la Constitución Federal, ¿qué autoridades están legitimadas para solicitar la
resolución prioritaria de un juicio de amparo?

A. Únicamente las Cámaras del Congreso de la Unión, por conducto de su presidente.


B. Las Cámaras del Congreso de la Unión, por conducto de su presidente o el Ejecutivo Federal, por
conducto del consejero jurídico.
C. Cualquier autoridad del país que justifique su interés en el asunto y la urgencia.

Justificación:

Artículo 94, párrafo noveno, constitucional:

“…Los juicios de amparo, las controversias constitucionales y las acciones de inconstitucionalidad se


substanciarán y resolverán de manera prioritaria cuando alguna de las Cámaras del Congreso, a través de su
presidente, o el Ejecutivo Federal, por conducto del consejero jurídico del gobierno, justifique la urgencia
atendiendo al interés social o al orden público, en los términos de lo dispuesto por las leyes reglamentarias…”

28
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

29. En una causa penal instruida por el delito de despojo, se dictó la medida provisional de restitución
del inmueble objeto del ilícito, a favor de la parte ofendida. El reo promovió juicio de amparo indirecto
en contra de esa resolución, sin agotar el recurso ordinario previsto en la legislación.

¿Es procedente el juicio de amparo indirecto?

A. Sí, porque el acto reclamado tiene una ejecución irreparable, al afectar de manera directa e inmediata
derechos sustantivos del poseedor del inmueble, ya que lo priva del uso y disfrute durante la vigencia
de la medida precautoria. Por tanto, se actualiza una excepción al principio de definitividad.
B. Sí, porque con independencia de que el acto reclamado no es de ejecución irreparable, el quejoso es el
reo y, por tanto, no está obligado a agotar los recursos ordinarios antes de acudir al juicio de amparo.
C. No, pues a pesar de que el acto reclamado tiene una ejecución irreparable, no se actualiza alguna de
las hipótesis de excepción al principio de definitividad; por tanto, el juicio de amparo es
improcedente.

Justificación:

Registro No. 160536, Décima Época, Instancia: Primera Sala, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y
su Gaceta, Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 3, Página: 2235, Tesis: 1a./J. 119/2011 (9a.), Jurisprudencia,
Materia(s): Común

MEDIDA PROVISIONAL DE RESTITUCIÓN O EMBARGO PRECAUTORIO CON MOTIVO DE


LA COMISIÓN DE UN DELITO. LA DETERMINACIÓN JUDICIAL QUE LA DECRETA DENTRO
DE JUICIO NO CONSTITUYE UNA EXCEPCIÓN AL PRINCIPIO DE DEFINITIVIDAD QUE
RIGE LA PROCEDENCIA DEL JUICIO DE AMPARO INDIRECTO. De conformidad con el artículo
107, fracción III, inciso b), de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en relación con los
numerales 73, fracción XIII, y 114, fracción IV, de la Ley de Amparo, la acción constitucional de amparo
indirecto que se tramita ante los jueces de distrito, procede contra actos dictados dentro de juicio cuya
ejecución sea de imposible reparación, siempre que con anterioridad se agoten los recursos que en su caso
procedan. Condición impuesta que deriva de la observancia del principio de definitividad que rige al juicio de
amparo, el cual opera como regla general y tiene como excepciones legales los actos que importen peligro de
privación de la vida, deportación o destierro, así como cualquiera de los actos prohibidos por el artículo 22 de
la Constitución Federal. Por tanto, si la determinación judicial dictada dentro de juicio que decreta la
medida provisional de restitución o embargo precautorio de un inmueble relacionado con la comisión
del delito, a pesar de tener el carácter de actos de ejecución irreparable, no actualizan alguna de las
hipótesis de excepción al principio de definitividad; es obligación de la parte quejosa agotar el medio
ordinario de defensa que en su caso prevea la ley que rige dicho acto, que tenga como efecto
modificarlo, revocarlo o anularlo.

Precedentes: Contradicción de tesis 164/2011. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en
Materias Penal y Administrativa del Vigésimo Primer Circuito y el Segundo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Sexto Circuito. 31 de agosto de 2011. Cinco votos. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretario:
Julio Veredín Sena Velázquez.

Tesis de jurisprudencia 119/2011. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
cinco de octubre de dos mil once.

29
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

30. En una ley del Estado de México se estatuye que exclusivamente los notarios públicos del Estado de
México podrán formalizar en escritura pública los contratos relacionados con bienes inmuebles
ubicados en esa entidad federativa. Un notario del Distrito Federal promueve amparo pues estima que
dicho precepto implícitamente le prohíbe formalizar en escritura pública contratos relacionados con
bienes inmuebles del Estado de México sin que dicha prohibición existiera antes de la entrada en vigor
de esa ley. Conforme a la jurisprudencia de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, la ley reclamada tiene el carácter de:

A. Autoaplicativa.
B. Heteroaplicativa.
C. Autoaplicativa sólo si al momento de entrar en vigor la ley, el notario del Distrito Federal estuviera en
la hipótesis normativa: tener que formalizar en escritura pública un contrato sobre inmuebles del
Estado de México.

Justificación:

No. Registro: 183491


Jurisprudencia
Materia(s): Administrativa
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XVIII, Agosto de 2003
Tesis: 2a./J. 62/2003
Página: 236

NOTARIOS PÚBLICOS DEL DISTRITO FEDERAL. LAS DISPOSICIONES RELATIVAS A QUE


LA PROTOCOLIZACIÓN Y FORMALIZACIÓN DE DETERMINADOS ACTOS JURÍDICOS
DEBEN LLEVARSE A CABO POR NOTARIOS PÚBLICOS DEL ESTADO DE MÉXICO, SON DE
NATURALEZA AUTOAPLICATIVA PARA AQUELLOS FEDATARIOS. El criterio reiterado de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación en torno a la distinción entre una ley autoaplicativa y una
heteroaplicativa, conduce a concluir que los artículos 18, fracción I, 52, fracción XVIII, 56, último párrafo,
67, fracción III, 70, último párrafo, 71, segundo párrafo, 72, último párrafo, 81, fracción III, 100, fracción VI,
101, último párrafo, 107, fracción IV, 109, fracción II, 115, fracción VI, y 116, penúltimo párrafo, del
Reglamento del Libro Quinto del Código Administrativo del Estado de México, publicado en la Gaceta de
Gobierno de esa entidad el 13 de marzo de 2002, son autoaplicativos para los notarios públicos del Distrito
Federal. Lo anterior es así, ya que dichas disposiciones tienen fuerza obligatoria por sí mismas y afectan
implícitamente la situación de esos fedatarios, sin que sea necesario acto alguno que condicione su aplicación,
pues por su sola entrada en vigor les impiden implícitamente protocolizar las autorizaciones y licencias que
expida la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas de la mencionada entidad federativa, así como
formalizar en escritura pública los actos, convenios y contratos previstos en los referidos artículos 56, 115 y
116, toda vez que lisa y llanamente establecen que la protocolización y la formalización indicadas se lleven a
cabo por los notarios públicos del Estado de México, de manera que basta el hecho de tener el carácter de
notarios públicos del Distrito Federal para quedar afectados por las normas mencionadas, esto es, la sola
vigencia de los preceptos señalados afecta a esos funcionarios, porque extinguen en su perjuicio una situación
jurídica concreta.

Contradicción de tesis 28/2003-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Segundo en
Materia Administrativa del Segundo Circuito. 27 de junio de 2003. Cinco votos. Ponente: Juan Díaz Romero.
Secretario: Gonzalo Arredondo Jiménez.

Tesis de jurisprudencia 62/2003. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada de
nueve de julio de dos mil tres.
Suspensión

30
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

31. En los juicios sucesorios intestamentarios ¿Qué efectos tiene la publicación del edicto realizada en la
primera sección?

A. Llamar a juicio a aquellas personas inciertas o ignoradas que pudieran tener derecho a la sucesión del
de cujus.
B. Notificar a los interesados el inicio del juicio sucesorio.
C. Enterar a los acreedores respecto del fallecimiento del de cujus para que comparezcan a la sucesión a
deducir sus derechos.

Justificación:

Registro: 2000599
Décima Época
Instancia: Primera Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Libro VII, Abril de 2012, Tomo 1
Materia(s): Civil
Tesis: 1a./J. 7/2012 (10a.)
Página: 540

JUICIO SUCESORIO INTESTAMENTARIO. EL EDICTO PUBLICADO EN LA PRIMERA


SECCIÓN CONSTITUYE EL LLAMAMIENTO A JUICIO RESPECTO DE AQUELLOS
SUCESORES QUE NO FUERON EXPRESAMENTE SEÑALADOS EN EL ESCRITO INICIAL
(LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN). El artículo 818 del Código de Procedimientos
Civiles del Estado de Nuevo León, obliga al denunciante del juicio sucesorio intestamentario a expresar en su
demanda el nombre y domicilio de los demás coherederos, y si se trata o no de mayores de edad, bajo pena de
tener por no hecha la denuncia en caso de omitir esos datos. Por otra parte, el numeral 819 del mismo
ordenamiento, establece que una vez hecha la citada denuncia, el juez tendrá por radicado el juicio de
intestado y mandará publicar un edicto, por una sola vez, en el Boletín Judicial y en el Periódico Oficial
donde aquél no se publique, así como en un periódico de los de mayor circulación en el Estado, en el cual
convocará a quienes se crean con derecho a heredar para que comparezcan a deducirlo dentro de treinta días
contados desde la fecha de su publicación. En ese tenor, el edicto publicado en la primera sección de un
juicio sucesorio intestamentario tiene como fin "convocar" o llamar a juicio a aquellas personas
inciertas o ignoradas que pudieran tener derecho a la sucesión del de cujus, a efecto de que intervengan
en el juicio sucesorio referido para que se les reconozca la calidad de herederos con todas las
consecuencias legales, y se respeten sus derechos previstos en los artículos 14 y 16 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Contradicción de tesis 308/2011. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Tercero,
ambos en Materia Civil del Cuarto Circuito. 30 de noviembre de 2011. La votación se dividió en dos partes:
mayoría de cuatro votos en cuanto a la competencia. Disidente y Ponente: José Ramón Cossío Díaz.
Unanimidad de cinco votos en cuanto al fondo. Secretaria: Mireya Meléndez Almaraz.

Tesis de jurisprudencia 7/2012 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
dieciocho de enero de dos mil doce.

31
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

32. Conforme lo dispuesto en el artículo 68 de la Ley de Instituciones de Crédito, los contratos o las
pólizas en los que se hagan constar los créditos que otorguen las instituciones de crédito, junto con el
estado de cuenta certificado por el contador facultado por la institución de crédito acreedora, serán
títulos ejecutivos, sin necesidad de reconocimiento de firma ni de otro requisito.

Por su parte, el Código de Comercio establece: “Artículo 1,194. El que afirma está obligado a probar. En
consecuencia, el actor debe probar su acción y el reo sus excepciones.” “Artículo 1,195. El que niega no está
obligado a probar, sino en el caso en que su negación envuelva afirmación expresa de un hecho.” “Artículo
1,196. También está obligado a probar el que niega, cuando al hacerlo desconoce la presunción legal que tiene
a su favor el colitigante.”

En un juicio ejecutivo mercantil, una institución de crédito acompañó a su demanda, como documentos
fundatorios de su acción, el contrato en el que consta el crédito respectivo y el estado de cuenta
certificado por el contador facultado por dicha institución crediticia. La demandada, al contestar la
demanda, cuestionó la calidad del contador en vía de excepción. Acorde a la jurisprudencia de la
Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ¿a quién le corresponde la carga de la
prueba?

A. A la parte actora, pues al exhibir el estado de cuenta certificado, implícitamente afirmó que fue
suscrito por un contador facultado para tal efecto; entonces, debe comprobar la calidad que cuestionó
el demandado.
B. A la parte demandada, porque su argumento negativo está dirigido a desconocer la presunción legal
de que goza dicho documento.
C. A la parte actora, ya que la presunción legal contenida en el artículo 68 de la Ley de Instituciones de
Crédito, se constriñe a demostrar el monto del adeudo y no la calidad profesional del contador.

Justificación: No. Registro: 188282. Jurisprudencia. Materia(s): Civil. Novena Época. Instancia: Primera
Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XIV, Diciembre de 2001. Tesis: 1a./J.
100/2001. Página: 6

CERTIFICACIÓN CONTABLE EXPEDIDA EN TÉRMINOS DEL ARTÍCULO 68 DE LA LEY DE


INSTITUCIONES DE CRÉDITO. CORRESPONDE A LA PARTE DEMANDADA PROBAR QUE
LA PERSONA QUE LA EXPIDE NO ES CONTADOR CUANDO, VÍA EXCEPCIÓN, CUESTIONA
TAL CALIDAD. En materia procesal mercantil se han adoptado diversas reglas en relación con la
distribución de la carga de la prueba, entre ellas, la relativa a que el que niega no está obligado a probar; sin
embargo, en el Código de Comercio se prevén dos excepciones a ésta, pues de conformidad con lo dispuesto
en sus artículos 1195 y 1196, el que niega estará obligado a probar cuando: a) su negación envuelva una
afirmación expresa de un hecho y b) desconoce la presunción legal que tiene a su favor el colitigante. En
congruencia con lo anterior, y tomando en consideración que el artículo 68 de la Ley de Instituciones de
Crédito otorga a favor del estado de cuenta certificado por un contador autorizado por la institución de
crédito, una presunción legal, en tanto lo eleva a categoría de título ejecutivo junto con otros documentos
(título que por su naturaleza es considerado prueba preconstituida), y lo reviste o lo tasa con un máximo valor
probatorio al establecer que hará fe de su contenido, salvo prueba en contrario, además de que el valor pleno
que le atribuye abarca la totalidad del documento (desde la calidad de quien lo suscribe, hasta los datos en él
consignados), puede concluirse que es a la persona que objeta, en vía de excepción, la calidad del contador
que certificó el estado de cuenta, a quien corresponde la carga probatoria, en términos del artículo 1196
citado, porque su argumento negativo está dirigido a desconocer la presunción legal de que goza dicho
documento por disposición expresa del citado artículo 68.

Contradicción de tesis 104/2000-PS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia
Civil del Sexto Circuito y el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Tercer Circuito. 22 de agosto de
2001. Mayoría de tres votos. Disidentes: José de Jesús Gudiño Pelayo y Humberto Román Palacios. Ponente:
Juventino V. Castro y Castro. Secretario: Arturo Fonseca Mendoza.

32
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

33. Un código civil de una entidad federativa dispone: “Artículo 308. Los alimentos comprenden la comida, el
vestido, la habitación y la asistencia en casos de enfermedad. Respecto de los menores los alimentos comprenden,
además, los gastos necesarios para la educación primaria del alimentista, y para proporcionarle algún oficio, arte
o profesión honestos y adecuados a su sexo y circunstancias personales.”

“Artículo 311. Los alimentos han de ser proporcionados a las posibilidades del que debe darlos y a las necesidades
de quien debe recibirlos…”

“Artículo 314. La obligación de dar alimentos no comprende la de proveer de capital a los hijos para ejercer el
oficio, arte o profesión a que se hubieren dedicado.”

Conforme al criterio de la Suprema Corte, por regla general, ¿cuáles son los requisitos que deben observarse para
fijar el monto de la pensión alimenticia?

A. Debe atenderse únicamente al estado de necesidad del acreedor y a las posibilidades reales del deudor para
cumplirla, con base en un criterio estrictamente matemático. Es decir, para fijar el monto de la pensión debe
dividirse el ingreso del deudor entre el número de acreedores y el propio deudor, pero éste contado como “dos
personas”. Lo anterior, ya que el deudor debe atender a sus propias necesidades, que por sus circunstancias
personales, son mayores que las de sus acreedores.
B. Debe atenderse al estado de necesidad del acreedor y a las posibilidades reales del deudor para cumplirla, así
como el entorno social en que éstos se desenvuelven, sus costumbres y demás particularidades que representa la
familia a la que pertenecen.
C. Debe atenderse al estado de necesidad del acreedor y a las posibilidades reales del deudor para cumplirla, de tal
forma que la pensión alimenticia únicamente cubra las necesidades vitales de aquél.

Justificación:

Registro No. 189214


Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XIV, Agosto de 2001
Página: 11
Tesis: 1a./J. 44/2001
Jurisprudencia
Materia(s): Civil

ALIMENTOS. REQUISITOS QUE DEBEN OBSERVARSE PARA FIJAR EL MONTO DE LA PENSIÓN POR
ESE CONCEPTO (LEGISLACIONES DEL DISTRITO FEDERAL Y DEL ESTADO DE CHIAPAS). De lo
dispuesto en los artículos 308, 309, 311 y 314 del Código Civil para el Distrito Federal y sus correlativos 304, 305, 307 y
310 del Estado de Chiapas, se advierte que los legisladores establecieron las bases para determinar el monto de la
pensión alimenticia, las cuales obedecen fundamentalmente a los principios de proporcionalidad y equidad que debe
revestir toda resolución judicial, sea ésta provisional o definitiva, lo que significa que para fijar el monto de esta
obligación alimentaria debe atenderse al estado de necesidad del acreedor y a las posibilidades reales del deudor para
cumplirla, pero, además, debe tomarse en consideración el entorno social en que éstos se desenvuelven, sus costumbres y
demás particularidades que representa la familia a la que pertenecen, pues los alimentos no sólo abarcan el poder cubrir
las necesidades vitales o precarias del acreedor, sino el solventarle una vida decorosa, sin lujos, pero suficiente para
desenvolverse en el status aludido; de ahí que no sea dable atender para tales efectos a un criterio estrictamente
matemático, bajo pena de violentar la garantía de debida fundamentación y motivación consagrada en el artículo 16 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y, eventualmente, hacer nugatorio este derecho de orden público
e interés social.

Precedentes: Contradicción de tesis 26/2000-PS. Entre las sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil
del Primer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado del Vigésimo Circuito. 4 de abril de 2001. Unanimidad de cuatro
votos. Ausente: Humberto Román Palacios. Ponente: Juventino V. Castro y Castro. Secretario: Arturo Aquino Espinosa.

Tesis de jurisprudencia 44/2001. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de veintitrés de mayo de
dos mil uno, por unanimidad de cuatro votos de los señores Ministros: presidente José de Jesús Gudiño Pelayo,
Humberto Román Palacios, Juan N. Silva Meza y Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Ausente: Juventino V.
Castro y Castro.

Asimismo, en la ejecutoria de la que derivó la anterior jurisprudencia, en lo que interesa, se sostuvo:

“…Por consiguiente, esta Sala colegiada arriba a la consideración de que en esta obligación alimentaria derivada de la
ley, deben imperar los principios de equidad y justicia, por ende, en su fijación se deberá de atender a las condiciones
reales prevalecientes en ese vínculo familiar de la que surge este derecho de alimentos.

Esto es, en su fijación además de atender a estos dos principios fundamentales a que hemos aludido: estado de necesidad
del acreedor y a las posibilidades reales del obligado, también deberán de ser consideradas y evaluadas las circunstancias
o características particulares que prevalecen o representa esa relación familiar, como sin duda lo constituyen: el medio
social en que se desenvuelven tanto el acreedor como el deudor alimentario, las costumbres y las circunstancias propias
en que se desenvuelve cada familia, desde luego, comprendiendo en ésta al cónyuge y a los hijos y demás que resulten
beneficiarios conforme lo señala la ley sustantiva aplicable al caso en concreto…”

33
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

34. ¿Conforme al Código Federal de Procedimientos Civiles, en qué casos las partes pueden oponerse a
la recepción de las pruebas?

A. En ninguno.
B. Cuando sean inverosímiles o inconducentes.
C. Exclusivamente cuando se haya decretado término supletorio.

Justificación:

Artículo 338.- Ninguna parte puede oponerse a que se reciba el negocio a prueba, ni tampoco a la recepción
de éstas, aun alegando que las ofrecidas son inverosímiles o inconducentes.

34
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

35. El artículo 181, fracción I, de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, establece que los
cheques deben presentarse para su pago dentro de los quince días naturales que sigan al de su fecha, si
fueron pagaderos en el mismo lugar de su expedición. Por su parte, los artículos 191, fracción III, y 192,
fracción I, de la misma ley disponen: “Artículo 191.- Por no haberse presentado o protestado el cheque en
la forma y plazos previstos en este capítulo, caducan: … III.- La acción directa contra el librador y contra sus
avalistas, si prueban que durante el término de presentación tuvo aquél fondos suficientes en poder del librado
y que el cheque dejó de pagarse por causa ajena al librador sobrevenida con posterioridad a dicho término.”
“Artículo 192.- Las acciones a que se refiere el artículo anterior prescriben en seis meses contados: I.- Desde
que concluye el plazo de presentación, las del último tenedor del documento;”

Conforme a la interpretación jurisprudencial que la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de


la Nación ha hecho de los anteriores preceptos, para que opere la prescripción de la acción cambiaria
directa derivada de la suscripción de un cheque, ¿es necesario que el librador demuestre en el juicio
respectivo, la existencia de fondos suficientes en poder de la institución librada durante el período de
presentación del título para su cobro?

A. Sí, pues se pierde la acción cambiaria directa solamente a condición de que se demuestre que durante
el término de presentación del cheque, el librador tuvo fondos suficientes y que el cheque dejó de
pagarse por causa ajena al librador sobrevenida con posterioridad a dicho término.
B. No, sólo es necesario acreditar que feneció el plazo de seis meses, contado a partir del día siguiente
de que vencieron los quince días para la presentación del cheque para su pago.
C. Sí, la acción cambiaria directa prescribe si el librador demustra en el juicio que durante los quince
días para la presentación del cheque para su pago, así como en los seis meses para que opere la
prescripción, tuvo fundos suficientes para responder del pago.

Justificación:

No. Registro: 170375


Jurisprudencia Materia(s): Civil
Novena Época. Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVII, Febrero de 2008. Tesis: 1a./J. 174/2007. Página: 179.

CHEQUES. LA PRESCRIPCIÓN PREVISTA EN LA FRACCIÓN I DEL ARTÍCULO 192 DE LA


LEY GENERAL DE TÍTULOS Y OPERACIONES DE CRÉDITO OPERA UNA VEZ FENECIDO
EL TÉRMINO EXIGIDO, SIN NECESIDAD DE QUE EL LIBRADOR DEMUESTRE EN JUICIO
LA EXISTENCIA DE FONDOS SUFICIENTES PARA EL COBRO DEL TÍTULO. La caducidad y la
prescripción son dos instituciones jurídicas distintas; la primera, a que se refiere el artículo 191 de la Ley
General de Títulos y Operaciones de Crédito, sólo afecta a la acción cambiaria en sí misma, impidiendo la
posibilidad de su ejercicio por el abandono del hacer procesal y no afecta al derecho principal, sino
únicamente a la acción que lo protege. En cambio, la prescripción de que trata el artículo 192 de la Ley
mencionada, es una excepción perentoria que supone exclusivamente el transcurso del tiempo, que aunque
afecta básicamente a la obligación cuando se actualiza, también impacta a la acción, es decir, es la
exoneración de un derecho y de una obligación de fondo que era exigible, y que supone no haberla ejercitado
durante cierto tiempo. Esta figura puede afectar tanto al derecho sustantivo principal como a la acción que lo
protege, pero de ser así, a ésta sólo la afecta como una consecuencia de la pérdida del principal. En
consecuencia, no hay razón alguna para pretender concatenar el requisito previsto en la fracción III del
artículo 191 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, respecto a que el librador o sus avalistas
demuestren que durante el término de presentación del cheque se tuvieron fondos suficientes en poder del
librado y se dejó de pagar por causa ajena al librador, sobrevenida con posterioridad a dicho término, para que
sea procedente la prescripción de la acción cambiaria directa a que se contrae la fracción I del artículo 192 del
propio ordenamiento, ya que para ello sólo es menester acreditar que feneció el plazo de seis meses exigido en
este último numeral, desde luego, contado a partir del día siguiente de que vencen los quince días para la
presentación del cheque para su pago, previstos en el artículo 181, fracción I, de la Ley mencionada.

Contradicción de tesis 102/2007-PS. Entre las sustentadas entre el entonces Tribunal Colegiado del Décimo
Noveno Circuito, actualmente Primer Tribunal Colegiado del Décimo Noveno Circuito y el entonces Primer
Tribunal Colegiado en Materias Civil y de Trabajo del Segundo Circuito, actualmente Primer Tribunal
Colegiado en Materia Civil del Segundo Circuito. 31 de octubre de 2007. Cinco votos. Ponente: José Ramón
Cossío Díaz. Secretario: Ivar Langle Gómez.

Tesis de jurisprudencia 174/2007. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
veintiocho de noviembre de dos mil siete.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

36. Los artículos 6º, fracciones V y VI de la Ley Federal de Correduría Pública, y 54 de su Reglamento, disponen:
“Artículo 6o.- Al corredor público corresponde: V. Actuar como fedatario público para hacer constar los contratos, convenios y
actos jurídicos de naturaleza mercantil, excepto en tratándose de inmuebles, así como en la emisión de obligaciones y otros
títulos valor; en hipotecas sobre buques, navíos y aeronaves que se celebren ante él, así como para hacer constar los hechos de
naturaleza mercantil; VI. Actuar como fedatario en la constitución y en los demás actos previstos por la Ley General de
Sociedades Mercantiles incluso aquellos en los que se haga constar la representación orgánica;”

“Artículo 54.- Las pólizas y actas expedidas por el corredor en ejercicio de sus funciones, inclusive aquellas en que se haga
constar la designación y facultades de representación en las sociedades mercantiles de conformidad con la ley de la materia, se
deberán admitir para su inscripción en el Registro Público de la Propiedad y del Comercio, siempre que dichos instrumentos
cumplan con los requisitos legales.”

Por su parte, el artículo 10 de la Ley General de Sociedades Mercantiles dispone: “Artículo 10.- La representación de toda
sociedad mercantil corresponderá a su administrador o administradores, quienes podrán realizar todas las operaciones
inherentes al objeto de la sociedad, salvo lo que expresamente establezcan la Ley y el contrato social.- Para que surtan efecto
los poderes que otorgue la sociedad mediante acuerdo de la asamblea o del órgano colegiado de administración, en su caso,
bastará con la protocolización ante notario de la parte del acta en que conste el acuerdo relativo a su otorgamiento, debidamente
firmada por quienes actuaron como presidente o secretario de la asamblea o del órgano de administración según corresponda,
quienes deberán firmar el instrumento notarial, o en su defecto lo podrá firmar el delegado especialmente designado para ello
en sustitución de los anteriores.- El notario hará constar en el instrumento correspondiente, mediante la relación, inserción o el
agregado al apéndice de las certificaciones, en lo conducente, de los documentos que al efecto se le exhiban, la denominación o
razón social de la sociedad, su domicilio, duración, importe del capital social y objeto de la misma, así como las facultades que
conforme a sus estatutos le correspondan al órgano que acordó el otorgamiento del poder y, en su caso, la designación de los
miembros del órgano de administración.- Si la sociedad otorgare el poder por conducto de una persona distinta a los órganos
mencionados, en adición a la relación o inserción indicadas en el párrafo anterior, se deberá dejar acreditado que dicha persona
tiene las facultades para ello.”

Con base en lo anterior, resuelva el siguiente planteamiento: En el juicio ordinario mercantil 10/2012 del índice del
Juzgado Nonagésimo Noveno de lo Civil del Distrito Federal, comparece la demandada Miniautos de Occidente, S.A. de
C.V., por conducto de su administrador único Claudio Castro Cortés, a contestar la demanda instaurada en su contra.
Para acreditar la personalidad del referido representante, se exhibe la Póliza expedida por corredor público que
contiene la constitución de la referida persona moral en donde, en sus estatutos, se detallan las facultades que
corresponden al administrador único de la sociedad. ¿Es válido que el juez que conoce del juicio reconozca la
personalidad del referido administrador único no obstante que las facultades de éste consten en un documento expedido
por un corredor público y no por uno expedido por notario?

A. No, pues el corredor público no está facultado para dar fe del otorgamiento de poderes o mandatos, los cuales son
actos jurídicos de índole civil regulados por la legislación común, pues el mandato es un contrato previsto en los
Códigos Civiles de todas las entidades federativas del país y que implica un acto de representación voluntaria en tanto
que encuentra su fuente en la voluntad de las partes y se confiere precisamente a través del otorgamiento de un poder.
B. No, pues por regla general las actas constitutivas de las empresas deben protocolizarse ante notario público.
C. Si, pues a los corredores públicos corresponde actuar como fedatarios para hacer constar los contratos, convenios,
actos y hechos de naturaleza mercantil (excepto en tratándose de inmuebles), así como en la constitución,
modificación, fusión, escisión, disolución, liquidación y extinción de sociedades mercantiles, en la designación de sus
representantes legales y facultades de que estén investidos, y en los demás actos previstos en la Ley General de
Sociedades Mercantiles. Máxime que debe tomarse en cuenta que la representación orgánica comprende actos como
el nombramiento y facultamiento de los órganos de representación de las sociedades mercantiles (Consejo de
Administración, Administradores o Gerentes), por ser éstos quienes en términos del primer párrafo del artículo 10 de
la Ley General de Sociedades Mercantiles representan orgánicamente a la empresa y, por ello, los corredores públicos
están autorizados para certificar tales actos.

Justificación: No. Registro: 175352. Jurisprudencia. 9a. Época; 1a. Sala; S.J.F. y su Gaceta; XXIII, Abril de 2006; Pág. 25.
CORREDORES PÚBLICOS. ESTÁN FACULTADOS PARA DAR FE DE LA DESIGNACIÓN DE
REPRESENTANTES LEGALES DE LAS SOCIEDADES MERCANTILES Y DE LAS FACULTADES DE QUE
ESTÉN INVESTIDOS (REPRESENTACIÓN ORGÁNICA), CUANDO SE OTORGUEN EN LA CONSTITUCIÓN,
MODIFICACIÓN, FUSIÓN, ESCISIÓN, DISOLUCIÓN, LIQUIDACIÓN Y EXTINCIÓN DE AQUÉLLAS. Conforme
a los artículos 6o., fracciones V y VI, de la Ley Federal de Correduría Pública y 54 de su Reglamento, a los corredores públicos
corresponde actuar como fedatarios para hacer constar los contratos, convenios, actos y hechos de naturaleza mercantil
(excepto en tratándose de inmuebles), así como en la constitución, modificación, fusión, escisión, disolución, liquidación y
extinción de sociedades mercantiles, en la designación de sus representantes legales y facultades de que estén investidos, y en
los demás actos previstos en la Ley General de Sociedades Mercantiles. Ahora bien, si se toma en cuenta que la representación
orgánica comprende actos como el nombramiento y facultamiento de los órganos de representación de las sociedades
mercantiles (Consejo de Administración, Administradores o Gerentes), por ser éstos quienes en términos del primer párrafo del
artículo 10 de la Ley General de Sociedades Mercantiles representan orgánicamente a la empresa, es indudable que los
corredores públicos están autorizados para certificar tales actos; sin embargo, no están facultados para dar fe del otorgamiento
de poderes o mandatos, los cuales son actos jurídicos de índole civil regulados por la legislación común, pues el mandato es un
contrato previsto en los Códigos Civiles de todas las entidades federativas del país y que implica un acto de representación
voluntaria en tanto que encuentra su fuente en la voluntad de las partes y se confiere precisamente a través del otorgamiento de
un poder; de ahí que las pólizas y actas expedidas por los corredores públicos en que hagan constar la designación y facultades
de representación de las sociedades mercantiles (representación orgánica), deberán admitirse para su inscripción en el Registro
Público de la Propiedad y del Comercio, siempre y cuando dichos instrumentos cumplan con los requisitos legales y se trate de
actos exclusivamente de carácter mercantil.

Contradicción de tesis 33/2002-PS. Entre las sustentadas, por una parte, por los Tribunales Colegiados Noveno en Materia de
Trabajo y Noveno en Materia Administrativa, ambos del Primer Circuito y, por otra, por el Primer Tribunal Colegiado en
Materia Administrativa del Tercer Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado del Quinto Circuito. 3 de agosto de 2005. Cinco
votos. Ponente: Juan N. Silva Meza. Secretario: Pedro Isaías Castrejón Miranda.- Tesis de jurisprudencia 113/2005. Aprobada
por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha tres de agosto de dos mil cinco.

36
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

37. El artículo 170 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito establece que el pagaré debe
contener la promesa incondicional de pagar una suma determinada de dinero. Por su parte, la ley
monetaria establece que la unidad del sistema monetario en México es el “peso”.

¿Puede pactarse válidamente en un pagaré una obligación de pago que no sea unidad monetaria?

A. Sí, siempre que se trate de una unidad de cuenta que, por disposición expresa del legislador,
represente un valor de fácil determinación en moneda nacional.
B. No, porque no se cumpliría con el requisito de existencia del pagaré, establecido por el artículo 170
de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.
C. No, porque las partes solamente pueden renunciar a derechos privados, y en este caso, la ley
monetaria es de orden público.

Justificación:

Registro: 179836
Jurisprudencia
Materia(s): Civil
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XX, Diciembre de 2004
Tesis: 1a./J. 95/2004
Página: 259

PAGARÉ. EN ÉL PUEDEN PACTARSE LEGALMENTE OBLIGACIONES DE PAGO EN UNIDADES


DE INVERSIÓN (UDIS). Conforme al artículo 14 de la Constitución Federal, en materia civil imperan los
principios de literalidad o interpretación jurídica de la ley, y a falta de ésta, los principios generales del
derecho. Ahora bien, del artículo 170, fracción II, de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, en
relación con los diversos 1o. y 7o. de la Ley Monetaria de los Estados Unidos Mexicanos, se advierte que en
todo pagaré debe señalarse expresamente la promesa incondicional de pagar una suma determinada de dinero,
denominada en pesos y sus fracciones, por ser ésta la moneda de curso legal en el país; sin embargo, esa regla
general no es absoluta, porque mediante la expedición del Decreto por el que se establecen las obligaciones
que podrán denominarse en unidades de inversión y reforma y adiciona diversas disposiciones del Código
Fiscal de la Federación y de la Ley del Impuesto sobre la Renta, publicado en el Diario Oficial de la
Federación el 1o. de abril de 1995, se previó que las obligaciones de pago de sumas en moneda nacional
convenidas, entre otros documentos, en títulos de crédito, salvo en cheques, podrán denominarse en una
unidad de cuenta llamada unidad de inversión (Udi), cuyo valor en pesos publicará periódicamente el
Banco de México en el Diario Oficial de la Federación y que las obligaciones denominadas en unidades
de inversión se considerarán de monto determinado, puesto que se solventarán entregando su
equivalente en moneda nacional, multiplicando el monto de la obligación, expresado en unidades de
inversión, por el valor de dicha unidad correspondiente al día en que se efectúe el pago. Por tanto, si se
tiene en cuenta que dicho decreto fue expedido con posterioridad a la Ley General de Títulos y Operaciones
de Crédito, cuya publicación oficial fue el 27 de agosto de 1932; que ambos ordenamientos legales tienen la
misma jerarquía en términos del artículo 133 constitucional, así como el principio de aplicación de las leyes
en el tiempo, consistente en que la ley posterior reforma o deroga la anterior, es claro que lo dispuesto en el
citado decreto debe entenderse como una excepción a la regla prevista en la fracción II del artículo 170 de la
Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito y, por ende, legalmente pueden pactarse en un pagaré
obligaciones de pago en unidades de inversión (Udis), porque aun cuando no sean una unidad monetaria, sí
constituyen una unidad de cuenta que, por disposición expresa del legislador, representan un valor de fácil
determinación en moneda nacional.

Contradicción de tesis 1/2004-PS. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Tercer Circuito y el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Segundo Circuito. 29 de septiembre de
2004. Unanimidad de cuatro votos. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretario: José de Jesús Bañales
Sánchez.- Tesis de jurisprudencia 95/2004. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha veintinueve de septiembre de dos mil cuatro.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

38. El artículo 170 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito establece que el pagaré debe
contener, entre otros requisitos, la fecha y el lugar en que se suscriba el documento. El artículo 15 de
esa ley señala que las menciones y requisitos que el título de crédito necesitan para su eficacia, podrán
ser satisfechos hasta antes de la presentación para su aceptación o pago. Un pagaré es presentado para
su pago, pero sin consignar el lugar de suscripción. Conforme a la jurisprudencia de la Suprema Corte
¿cuál es la consecuencia jurídica de esa omisión?

A. Surte sus efectos como título de crédito, por tratarse de un requisito formal que solamente incide en la
competencia del tribunal.
B. Surte sus efectos como título de crédito, porque esa omisión es intrascendente.
C. No surte sus efectos como título de crédito, por lo que no es ejecutable.

Justificación:

No. Registro: 2000613


Jurisprudencia
Materia(s): Civil
Décima Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: Libro VII, Abril de 2012, Tomo 1
Tesis: 1a./J. 36/2012 (10a.)
Página: 649

PAGARÉ. UNA VEZ QUE ES PRESENTADO PARA SU ACEPTACIÓN O PAGO, LA OMISIÓN DE


INSERTAR EL LUGAR DE SUSCRIPCIÓN IMPIDE QUE SURTA EFECTOS COMO TÍTULO DE
CRÉDITO, PUES TAL CIRCUNSTANCIA NO SE PRESUME EXPRESAMENTE EN LA LEY. Conforme
a los artículos 8, 14, 15, 170 y 171, de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, se desprende que
para que los títulos de crédito surtan sus efectos como tales, deben reunir todos los requisitos que la referida
legislación señala, los cuales únicamente pueden ser subsanados con anterioridad a que éstos sean presentados
para su aceptación o pago. Por otra parte, el artículo 171 de la referida ley presume, únicamente, qué debe
suceder ante la falta del lugar y de la época de pago. Por tanto, si el lugar de suscripción no se encuentra
expresamente establecido dentro de las referidas presunciones, resulta claro que dicho requisito no es
subsanable ni puede presumirse, por lo que al ser un requisito esencial, su omisión evita que el mencionado
título de crédito surta todos sus efectos como tal.

Contradicción de tesis 376/2011. Suscitada entre el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer
Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado del Décimo Segundo Circuito. 30 de noviembre de 2011. La votación
se dividió en dos partes: mayoría de cuatro votos por lo que se refiere a la competencia. Disidente: José
Ramón Cossío Díaz. Unanimidad de cinco votos en cuanto al fondo. Ponente: Olga Sánchez Cordero de
García Villegas. Secretario: Jorge Roberto Ordóñez Escobar.

Tesis de jurisprudencia 36/2012 (10a.). Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de
fecha ocho de febrero de dos mil doce.

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DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

39. ¿Cuáles son las excepciones al principio de igualdad procesal que el Código Federal de
Procedimientos Civiles establece para los entes gubernamentales?

A. Únicamente están exentos de prestar las garantías exigidas por el código.


B. Están exentos de prestar las garantías exigidas por el código. Además, no se puede dictar en su contra
auto de ejecución ni de embargo.
C. Ninguna.

Justificación:

Artículo 4º.- Las instituciones, servicios y dependencias de la Administración Pública de la Federación y de


las entidades federativas, tendrán dentro del procedimiento judicial, en cualquier forma en que intervengan, la
misma situación que otra parte cualquiera; pero nunca podrá dictarse, en su contra, mandamiento de
ejecución ni providencia de embargo, y estarán exentos de prestar las garantías que este Código exija
de las partes.

Las resoluciones dictadas en su contra serán cumplimentadas por las autoridades correspondientes, dentro de
los límites de sus atribuciones.

La intervención que, en diversos casos, ordena la ley que se dé al Ministerio Público, no tendrá lugar cuando,
en el procedimiento, intervenga ya el Procurador General de la República o uno de sus Agentes, con cualquier
carácter o representación.

39
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

40. El artículo 15 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito dispone que las menciones y
requisitos que el título de crédito o el acto en él consignado necesitan para su eficacia, podrán ser
satisfechos por quien en su oportunidad debió llenarlos, hasta antes de la presentación del título para su
aceptación o para su pago.

Un pagaré es presentado para su aceptación o pago, y consta como beneficiario el nombre de una
persona distinta de aquella con que originalmente se obligó el suscriptor. Esa situación es:

A. Irrelevante, porque la naturaleza de los títulos de crédito es la circulación, por lo que son pagaderos a
cualquier persona que aparezca como beneficiario o endosatario.
B. Irrelevante, porque se trata de un requisito que puede ser llenado posteriormente por el beneficiario,
en términos del artículo trascrito.
C. Determinante para la legitimación de quien ejerce la acción cambiaria directa, al ostentarse como
titular del crédito sin tener esa calidad o haberlo adquirido por un medio de transmisión cambiario o
alguno autorizado por la ley.

Justificación:

No. Registro: 161031


Jurisprudencia
Materia(s): Civil
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: XXXIV, Septiembre de 2011
Tesis: 1a./J. 30/2011
Página: 845

PAGARÉ. CUANDO EL NOMBRE DEL BENEFICIARIO SE DEJÓ EN BLANCO AL MOMENTO DE


LA FIRMA Y QUIEN APARECE EN EL DOCUMENTO AL PRESENTARLO PARA SU ACEPTACIÓN
O PAGO ES UNA PERSONA DISTINTA DE AQUELLA ANTE LA QUE ORIGINALMENTE SE
OBLIGÓ EL SUSCRIPTOR, DICHO BENEFICIARIO CARECE DE LEGITIMACIÓN PARA EJERCER
LA ACCIÓN CAMBIARIA DIRECTA. El pagaré jurídicamente representa un título de crédito nominativo
en tanto debe expedirse a favor de una persona por mandato expreso de la fracción III del artículo 170 de la
Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, y si bien el obligado tendrá que responder ante distintos
tenedores, la intención que se presume de su parte es que la circulación del documento fuera restringida, esto
es, a través de uno de los medios reconocidos por el derecho aplicable para los títulos nominativos. Lo
anterior evidencia que el llenado respecto del beneficiario debe hacerse asentando en el pagaré el nombre de
la persona con quien en principio se obligó el suscriptor, y que la inserción -si bien puede hacerse en un
momento posterior a la firma, en términos del artículo 15 de la citada ley, por no ser un requisito de
existencia-, debe realizarse antes de que el documento entre en circulación, pues de otra forma le sería dable a
cualquier tenedor poner el nombre que mejor convenga a sus intereses, pudiendo actuar con arbitrariedad y
abuso en contra de la voluntad del obligado, modificando, incluso, los términos de su promesa, lo que
implicaría que pudiera cambiar la naturaleza intrínseca del título y su forma de circulación, contraviniendo el
artículo 21 de la ley de la materia. Por tanto, si al presentarse el pagaré para su aceptación o pago, consta
como beneficiario el nombre de una persona distinta de aquella con quien originalmente se obligó el
suscriptor, cuando se dejó en blanco el espacio respectivo en el momento de la firma, es oponible la
excepción prevista en la fracción V del artículo 8o. de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, la
que, de acreditarse, determinará la falta de legitimación en el juicio ejecutivo de quien ejercita la acción
cambiaria directa por ostentarse como titular del crédito, sin tener esa calidad al no haberlo adquirido por un
medio de transmisión cambiario o por alguno de los autorizados por la ley.

Contradicción de tesis 323/2009. Entre las sustentadas por el Quinto Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Tercer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado del Décimo Quinto Circuito. 9 de febrero de 2011. Mayoría de
tres votos. Disidente: José Ramón Cossío Díaz. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas.
Secretaria: Constanza Tort San Román.

Tesis de jurisprudencia 30/2011. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
nueve de marzo de dos mil once.

40
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

41. En el caso de despojo de un inmueble sobre el cual se ejerce posesión originaria y derivada ¿quién
tiene legitimación en la causa para promover un juicio plenario de posesión, y pedir su restitución?

A. El poseedor derivado.
B. El poseedor originario.
C. El simple tenedor.

Justificación:

Código Civil Federal

Artículo 792. En caso de despojo, el que tiene la posesión originaria goza del derecho de pedir que sea
restituído el que tenía la posesión derivada, y si éste no puede o no quiere recobrarla, el poseedor originario
puede pedir que se le dé la posesión a él mismo.

41
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

42. El artículo 1934 del Código Civil Federal establece que la acción de responsabilidad civil prescribe
en dos años, contados a partir del día en que se haya causado el daño.

En un juicio sobre responsabilidad civil se demanda la reparación de los daños causados tres años
atrás, pero se alega que el plazo de prescripción debe computarse a partir de que tuvo conocimiento del
daño causado, y que este conocimiento se obtuvo un mes antes de iniciado el juicio.

Con apego a la jurisprudencia de la Suprema Corte ¿esta prescrita la acción deducida?

A. Sí, porque el artículo 1934 dice expresamente que el plazo comienza a correr desde el día en que se
causó el daño.
B. No. El plazo se inició a partir de que el afectado tuvo conocimiento del daño causado.
C. Sí, porque es natural que las víctimas de daños se inconformen con ellos desde que los resienten.

Justificación:

No. Registro: 160583


Jurisprudencia
Materia(s): Civil
Décima Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Tomo: Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 3
Tesis: 1a./J. 113/2011 (9a.)
Página: 2206

DAÑOS CAUSADOS EN TÉRMINOS DEL CAPÍTULO V DEL TÍTULO PRIMERO DE LOS CÓDIGOS
CIVILES FEDERAL Y PARA EL DISTRITO FEDERAL. INICIO DEL CÓMPUTO DEL PLAZO PARA
QUE OPERE LA PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN RELATIVA A SU REPARACIÓN, CONFORME AL
ARTÍCULO 1934 DE DICHOS ORDENAMIENTOS. Conforme al citado precepto, la acción para exigir la
reparación de los daños causados en términos del capítulo V, del Título Primero del Código Civil Federal y
del Código Civil para el Distrito Federal, prescribe en dos años contados a partir del día en que se haya
causado el daño, sin condicionarlo a ninguna otra situación, sin embargo, se considera que resulta necesario
atender al momento en que el afectado tiene conocimiento del daño que se le causa, toda vez que
considerando que es la omisión del acreedor de exigir el cumplimiento de la obligación que tiene el deudor,
durante el término establecido en la ley, lo que actualiza la prescripción, resulta que es presupuesto
indispensable de la misma, que el acreedor tenga conocimiento del derecho del que deriva tal
obligación, a efecto de que pueda estar en condiciones de exigirlo. Por tanto, si bien conforme al referido
artículo 1934, el plazo de la prescripción de la acción para exigir la reparación de los daños causados en
términos del señalado capítulo V, empieza a correr a partir de que se causa el daño, lo cierto es que tal
regla aplicará siempre y cuando el afectado tenga conocimiento del mismo, pues de lo contrario, dicho
plazo iniciará hasta en tanto el afectado conozca el daño y en consecuencia, esté en posibilidad de exigir
la obligación que deriva del mismo; debiendo señalarse que si el actor asevera haber tenido
conocimiento en una fecha determinada y el demandado niega esa aseveración manifestando que tuvo
conocimiento desde antes, entonces, la carga probatoria de esa afirmación le corresponde al
demandado.

Contradicción de tesis 319/2010. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del
Primer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil del Tercer Circuito. 22 de junio de 2011.
Cinco votos. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Ana Carolina Cienfuegos
Posada.

Tesis de jurisprudencia 113/2011. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
cinco de octubre de dos mil once.

42
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

43. ¿Es eficaz el poder otorgado por una sociedad mercantil a un comisario de la misma sociedad?

A. Si es eficaz, ya que no existe impedimento alguno para que un comisario pueda ser apoderado de la
misma sociedad mercantil.
B. El mandato así otorgado no tiene eficacia, por ser incompatible con las funciones de supervisión
inherentes al comisario.
C. Es eficaz, en virtud que no existe impedimento para ejercer el cargo de apoderado y comisario a la
vez, dado que la función del comisario se desenvuelve en la esfera interna de la sociedad mercantil,
consistente en vigilar y supervisar permanentemente las operaciones de los administradores, mientras
que la función del apoderado, es hacia el exterior de la sociedad, a fin de realizar actos jurídicos que
le encomienda el representado; circunstancia que no provoca la actualización de la incompatibilidad
entre los citados cargos.

Justificación: REGISTRO 170970. [J]; 9a. Época; 1a. Sala; S.J.F. y su Gaceta; XXVI, Noviembre de 2007;
Pág. 38

APODERADO. ES INEFICAZ EL PODER OTORGADO POR UNA SOCIEDAD ANÓNIMA EN SU


FAVOR CUANDO DETENTA AL MISMO TIEMPO EL CARGO DE COMISARIO DE LA MISMA
POR SER INCOMPATIBLES ENTRE SÍ. Las funciones que la ley encomienda a los comisarios de las
sociedades anónimas son, en esencia, vigilar ilimitadamente y en cualquier tiempo las operaciones de la
sociedad, esto es, proteger a los accionistas a través de la vigilancia de las operaciones de la sociedad, de los
actos del Consejo de Administración y de los funcionarios de la misma. Para lograr ese objetivo, es
indispensable que los comisarios no dependan directa o indirectamente de los administradores porque ello les
privaría de la necesaria libertad de acción para el cumplimiento de sus tareas. De aquí que la Ley General de
Sociedades Mercantiles haya establecido que los comisarios no pueden ser dependientes de la negociación, ni
parientes de los administradores en los grados señalados en la misma Ley. Por su parte, los apoderados de la
sociedad son representantes de la misma y, con los límites de su representación establecidos en el mismo
poder o en los acuerdos de la asamblea o del órgano de administración, tienen facultades para obligar a la
persona moral que les otorgó tal representación. Así, es evidente que la actuación de los apoderados de la
sociedad es materia de vigilancia por parte del comisario, ya que la Ley les da facultades para vigilar todas las
operaciones de la sociedad y esto incluye también las realizadas a través de los apoderados. Si estos actos u
operaciones no fueran sujetas a la vigilancia del órgano creado en la Ley para ello (comisario), se podría caer
en el absurdo de que los administradores recurrieran a apoderados para realizar actos contrarios a los intereses
de la sociedad y en beneficio propio, en detrimento del patrimonio social y de los propios socios, ya que éstos
no estarían sujetos a la supervisión del comisario. Por lo tanto, las figuras del comisario y del apoderado de la
misma sociedad no son compatibles, por lo que una persona no las puede ejercer al mismo tiempo, puesto que
si una de las funciones del órgano de vigilancia es la de supervisar las operaciones de los administradores por
sí o por interpósita persona, y es el propio comisario el que realiza tales operaciones, se conjuntarían en una
misma persona dos funciones distintas y que, incluso, se contraponen, como lo es realizar actos de
administración y, a su vez, supervisar los mismos, lo cual sería incoherente con la independencia que deben
tener respecto de los administradores. Si se considerara que son compatibles en una sola persona las funciones
de comisario y de apoderado de la sociedad se afectaría la independencia que debe tener el comisario respecto
de los administradores, pues al ejercer el poder estaría realizando funciones de administración lo cual va en
contra de la naturaleza propia del comisariado. Por lo anterior, carece de eficacia cualquier poder otorgado a
favor del comisario para que realice actos a nombre de la sociedad y, en ese caso, estaría viciada la
personalidad con la que comparece a juicio aun cuando no existe norma expresa que así lo determine, ni que
lo prohíba expresamente.

Contradicción de tesis 64/2007-PS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Tercero y Cuarto,
ambos en Materia Civil del Primer Circuito. 12 de septiembre de 2007. Cinco votos. Ponente: José Ramón
Cossío Díaz. Secretario: Fernando A. Casasola Mendoza.

Tesis de jurisprudencia 143/2007. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
diecinueve de septiembre de dos mil siete.

43
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

44. La Ley de Concursos Mercantiles establece que la etapa de conciliación en ningún caso podrá
exceder de 365 días naturales. ¿En qué casos el conciliador puede solicitar al juez su vencimiento
anticipado?

A. Cuando considere que haya falta de disposición del comerciante para suscribir el convenio.
B. Cuando considere que haya falta de disposición del comerciante o de sus acreedores para suscribir el
convenio.
C. Cuando considere que haya falta de disposición del comerciante o de sus acreedores para suscribir el
convenio, o exista imposibilidad para celebrarlo.

Justificación:

Artículo 150.- El Comerciante estará obligado a colaborar con el conciliador y a proporcionarle la


información que éste considere necesaria para el desempeño de sus funciones.

El conciliador podrá solicitar al juez la terminación anticipada de la etapa de conciliación cuando


considere la falta de disposición del Comerciante o de sus acreedores para suscribir un convenio en
términos de esta Ley o la imposibilidad de hacerlo. El conciliador tomará en consideración si el
Comerciante incumplió un convenio que haya dado por terminado un concurso mercantil anterior. La
solicitud del conciliador se substanciará en la vía incidental y deberá razonar las causas que la motivaron.

44
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

45. La Ley de Concursos Mercantiles establece que la etapa de conciliación en ningún caso podrá
exceder de 365 días naturales. Si transcurre este plazo sin que se someta al juez un convenio, el juez
debe:

A. Remover de oficio al conciliador y solicitar una nueva designación al IFECOM.


B. Remover de oficio al conciliador, solicitar una nueva designación al IFECOM y reencausar el
procedimiento a la vía sumarísima.
C. Declarar la quiebra.

Justificación:

Artículo 167.- El Comerciante en concurso mercantil será declarado en estado de quiebra cuando:

I. El propio Comerciante así lo solicite;

II. Transcurra el término para la conciliación y sus prórrogas si se hubieren concedido, sin que se
someta al juez, para su aprobación, un convenio en términos de lo previsto en esta Ley, o;

III. El conciliador solicite la declaración de quiebra y el juez la conceda en los términos previstos en el
artículo 150 de esta Ley.

45
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

46. Los artículos 70, párrafos primero y último, del Código Penal Federal y 528 del Código Federal de
Procedimientos Penales, disponen: “Artículo 70. La prisión podrá ser sustituida, a juicio del juzgador,
apreciando lo dispuesto en los artículos 51 y 52 en los términos siguientes: …La sustitución no podrá
aplicarse a quien anteriormente hubiere sido condenado en sentencia ejecutoriada por delito doloso que se
persiga de oficio. Tampoco se aplicará a quien sea condenado por algún delito de los señalados en la fracción
I del artículo 85 de este Código”.

“Artículo 528. En toda sentencia condenatoria el tribunal que la dicte prevendrá que se amoneste al
sentenciado para que no reincida, advirtiéndole las sanciones a que se expone, lo que se hará en diligencia con
las formalidades que señala el artículo 42 del Código Penal Federal. La falta de esa diligencia no impedirá que
se hagan efectivas las sanciones de reincidencia y de habitualidad que fueren procedentes”.

Ahora bien, de la interpretación teleológica del precepto legal citado en primer término, en
concordancia con el segundo, se establece la siguiente conclusión:

A. Que la sustitución de la pena de prisión es procedente aun cuando contra el mismo reo exista
sentencia ejecutoriada por delito doloso perseguible de oficio, si ésta se dictó con posterioridad a la
comisión del delito por el que se le juzga.
B. Que por ningún motivo se otorgarán sustitutivos penales a quien, en diverso proceso, se le haya
dictado sentencia ejecutoriada por delito doloso que se persiga de oficio, ello, sin importar la fecha en
que haya sido sentenciado en dicha causa penal.
C. Que la amonestación hecha a quien ya ha sido condenado por un delito, independientemente de su
naturaleza (doloso o culposo, perseguible de oficio o por querella), no es vinculante, ni debe tomarse
en cuenta obligatoriamente para determinar si procede o no el otorgamiento de algún sustitutivo penal
en el segundo proceso.

Justificación: No. Registro: 172298. Jurisprudencia. Materia(s): Penal. Novena Época. Instancia: Primera
Sala. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XXV, Mayo de 2007. Tesis: 1a./J. 32/2007.
Página: 753

SUSTITUCIÓN DE LA PENA DE PRISIÓN. ES PROCEDENTE AUN CUANDO CONTRA EL


MISMO REO EXISTA SENTENCIA EJECUTORIADA POR DELITO DOLOSO PERSEGUIBLE
DE OFICIO, SI ÉSTA SE DICTÓ CON POSTERIORIDAD A LA COMISIÓN DEL DELITO POR
EL QUE SE LE JUZGA (INTERPRETACIÓN DEL ÚLTIMO PÁRRAFO DEL ARTÍCULO 70 DEL
CÓDIGO PENAL FEDERAL). La determinación de sanciones y el otorgamiento de los sustitutivos penales
se sustentan tanto en el Código Penal Federal como en el Código Federal de Procedimientos Penales, los
cuales no deben estudiarse aisladamente, pues constituyen un sistema normativo que permite y obliga al
juzgador, además de sancionar al responsable de un delito, a garantizarle un debido proceso y el respeto de
otros derechos fundamentales. Así, para determinar el alcance y la procedencia de la sustitución de la pena de
prisión prevista en el artículo 70 del Código Penal Federal, debe analizarse dicha institución a la luz del fin de
la sanción penal que se sustituye y del sistema que al respecto prevén los ordenamientos legales citados.
Ahora bien, del análisis de los artículos 24, 42 y 70 del Código Penal Federal, se advierte que la pena de
prisión no es el único medio para resocializar al condenado y reincorporarlo en el seno común del Estado,
sino que es posible acudir a otros medios sancionatorios que además de propiciar la prevención especial,
motivan al reo para adaptarse nuevamente a la sociedad, esto es, tienen como fin prevenir y evitar que el
sentenciado vuelva a cometer un ilícito, lo cual es acorde con el artículo 528 del Código Federal de
Procedimientos Penales, que dispone que en toda sentencia condenatoria deberá ordenarse la amonestación
del sentenciado para que no reincida, advirtiéndole de las sanciones a que se expone, entre las cuales está la
consistente en que en caso de cometer un nuevo delito no se le podrán conceder los sustitutivos penales a que
se refiere el artículo 70 aludido. En ese orden de ideas, de la interpretación teleológica del artículo 70 del
Código Penal Federal, se concluye que tal precepto obedece al comportamiento del reo frente a la pena;
de ahí que si bien no es posible conceder el beneficio de la sustitución de la pena a quienes insisten en
reiterar una conducta antisocial reprochable, tampoco puede negarse dicho sustitutivo a quienes no
han delinquido o cuando el ilícito por el que se les sanciona se cometió antes de la existencia de una
sentencia ejecutoriada, pues ésta no debe considerarse como antecedente para negar la sustitución de la
pena de prisión, ya que no es razonable ni proporcional que a una persona se le niegue la sustitución de
la pena por un hecho o acto que cometió antes de que por primera vez un juzgador le señalara las
consecuencias de su responsabilidad penal y le advirtiera las consecuencias de un acto delictivo
posterior. Lo anterior, no implica que el acceso a los sustitutivos penales se constituya en un derecho del
sentenciado, ya que el criterio que ahora se establece únicamente se traduce en que la autoridad judicial no
podrá negar los mismos, por el hecho de que exista una sentencia condenatoria ejecutoriada por delito doloso
que se persiga de oficio, sino que deberá verificar que el dictado de la misma es anterior a la fecha en que se
cometió el delito por el que en ese momento se juzga; ello, con independencia de que aun cuando no se
actualice tal circunstancia, esté en aptitud de negar los citados sustitutivos por razones diversas en ejercicio de
su arbitrio judicial.

46
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

47. En un proceso penal federal, se libró una orden de aprehensión en contra de Pedro R. por el delito
de robo con violencia, cometido respecto de bienes que se utilizaban para el funcionamiento de un
servicio público federal. En ese supuesto, el delito de robo simple se sancionaría con prisión de 2 años a
4 años; si se considera la agravante de violencia, la sanción que correspondería es de 2 años 6 meses a 9
años. De acuerdo con lo anterior, ¿en qué término prescribiría la acción penal en el asunto planteado?

A. 3 años.
B. 5 años 9 meses.
C. 1 año.

Justificación: Código Penal Federal: “100. Por la prescripción se extinguen la acción penal y las
sanciones, conforme a los siguientes artículos”.

“102. Los plazos para la prescripción de la acción penal serán continuos; en ellos se considerará el delito con
sus modalidades…”.

“104. La acción penal prescribe en un año, si el delito sólo mereciere multa; si el delito mereciere, además de
esta sanción, pena privativa de libertad o alternativa, se atenderá a la prescripción de la acción para perseguir
la pena privativa de libertad; lo mismo se observará cuando corresponda imponer alguna otra sanción
accesoria”.

“105. La acción penal prescribirá en un plazo igual al término medio aritmético de la pena privativa de la
libertad que señala la ley para el delito de que se trate, pero en ningún caso será menor de tres años”.

Tesis de jurisprudencia: Registro No. 168291. Novena Época. Instancia: Primera Sala. Fuente: Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta. XXVIII, Diciembre de 2008. Página: 117. Tesis: 1a./J. 65/2008.
Jurisprudencia. Materia(s): Penal

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL. PARA SU CÓMPUTO DEBE ATENDERSE A LA


PENALIDAD APLICABLE AL DELITO ESTABLECIDO EN CADA FASE QUE INTEGRA EL
PROCEDIMIENTO PENAL. La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido
que tanto al obsequiarse la orden de aprehensión como al dictar el auto de formal prisión, debe fijarse el
delito, ya sea en forma simple o con sus respectivas calificativas, modalidades o modificativas; de ahí que en
cualquier fase del procedimiento penal, el plazo para que opere la prescripción debe computarse a partir del
establecimiento del delito que se le atribuye al probable responsable. Así, la prescripción se actualiza en cada
etapa procesal, tomando en cuenta el delito por el cual se emite la determinación respectiva, atendiendo a si
existen o no calificativas sobre el ilícito establecido y conforme a la legislación correspondiente. Esto es, debe
considerarse la pena del delito configurado atribuido al responsable, ya sea básico o con todas sus
modalidades o circunstancias modificativas o calificativas, lo cual deriva en la obligación constitucional y
legal de todo juzgador consistente en que al emitir una orden de aprehensión, auto de formal prisión,
apelación o cualquier otro acto durante el proceso determine, según el delito de que se trate, los datos que
acrediten los elementos del tipo penal, no sólo para precisar la figura delictiva básica, sino también para que,
de ser el caso, se configure su específica referencia a un tipo complementado, subordinado o cualificado, pues
no debe perderse de vista que durante el proceso penal pueden actualizarse diferentes fases, por lo que deben
determinarse con precisión sus elementos constitutivos, incluyendo las modificativas o calificativas que, en su
caso, surjan de los hechos materia de la etapa procesal de que se trate. Por tanto, debe tomarse en cuenta el
delito determinado por el cual se sigue el procedimiento, en cualquiera de sus fases, de manera que la
prescripción quedará condicionada al transcurso del término establecido para la sanción que corresponda al
delito concreto señalado en cada etapa procesal. Lo anterior es así, porque conforme al principio de seguridad
jurídica, en cada una de ellas puede modificarse el delito, por lo que si al obsequiar la orden de aprehensión se
le atribuye al probable responsable determinado ilícito, el término para que opere la prescripción se
computará de acuerdo a los plazos previstos en la legislación correspondiente, y si al dictado del auto de
formal prisión se le ubica en uno diverso, ya sea básico o con calificativas, el indicado término se computará
de acuerdo a la penalidad aplicable a esta nueva valoración del delito, y de igual forma tendrá que hacerse en
cada una de las fases que integran el procedimiento penal.

Contradicción de tesis 46/2007-PS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal
del Tercer Circuito y el Cuarto Tribunal Colegiado del Décimo Quinto Circuito. 4 de junio de 2008. Cinco
votos. Ponente: Sergio A. Valls Hernández. Secretario: Antonio Espinosa Rangel.

Tesis de jurisprudencia 65/2008. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
veinticinco de junio de dos mil ocho.

47
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

48. Lea los siguientes artículos del Código Fiscal Federación: Artículo 102. Comete el delito de
contrabando quien introduzca al país o extraiga de él mercancías: I. Omitiendo el pago total o parcial de las
contribuciones o cuotas compensatorias que deban cubrirse. II. Sin permiso de autoridad competente, cuando
sea necesario este requisito. III. De importación o exportación prohibida.

Artículo 103. Se presume cometido el delito de contrabando cuando: I. Se descubran mercancías extranjeras
sin la documentación aduanera que acredite que las mercancías se sometieron a los trámites previstos en la
Ley Aduanera para su introducción al territorio nacional o para su internación de la franja o región fronteriza
al resto del país. II. Se encuentren vehículos extranjeros fuera de una zona de veinte kilómetros en cualquier
dirección contados en línea recta a partir de los límites extremos de la zona urbana de las poblaciones
fronterizas, sin la documentación a que se refiere la fracción anterior.

Artículo 105. Será sancionado con las mismas penas del contrabando, quien: I. Enajene, comercie, adquiera o
tenga en su poder por cualquier título mercancía extranjera que no sea para su uso personal, sin la
documentación que compruebe su legal estancia en el país, o sin el permiso previo de la autoridad federal
competente, o sin marbetes o precintos tratándose de envases o recipientes, según corresponda, que contengan
bebidas alcohólicas o su importación esté prohibida.

Ahora bien, se acredita que una persona posee un vehículo extranjero en la zona urbana de una
población fronteriza, en la que reside, sin que cuente con la documentación necesaria para que ese
automóvil transite en dicha zona. También se acredita que la posesión del vehículo no responde a un
uso personal. ¿En cuál de las disposiciones transcritas encuadraría la conducta antes descrita?

A. En el artículo 105, fracción I, del Código Fiscal de la Federación, porque se acredita que tiene en su
poder una mercancía extranjera que no es para su uso personal sin el permiso previo de la autoridad
federal competente.
B. En el artículo 102 del Código Fiscal de la Federación porque ahí encuadra la posesión de un vehículo
extranjero dentro de la zona de veinte kilómetros contados a partir de la zona urbana de una población
fronteriza, sin poseer el permiso para transitar con el vehículo en esa zona.
C. En el artículo 103, fracción II, del Código Fiscal de la Federación, porque se posee un vehículo
extranjero en la zona urbana de una población fronteriza, sin el permiso de la autoridad federal
competente.

Justificación: No. Registro: 173348. Jurisprudencia. Materia(s): Penal. Novena Época. Instancia: Primera Sala.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XXV, Febrero de 2007. Tesis: 1a./J. 104/2006. Página:
219.- CONTRABANDO. TRATÁNDOSE DE VEHÍCULOS DE PROCEDENCIA EXTRANJERA, SE
ACTUALIZAN LOS TIPOS DE CONTRABANDO BÁSICO, CONTRABANDO PRESUNTO O
CONTRABANDO EQUIPARADO A QUE SE REFIEREN LOS ARTÍCULOS 102, 103 FRACCIÓN II
O 105, FRACCIÓN VII Y NO EL GENÉRICO CONTENIDO EN EL ARTÍCULO 105 FRACCIÓN I,
DEL CÓDIGO FISCAL DE LA FEDERACIÓN. Al existir diversos preceptos legales que pretenden
sancionar el hecho punible consistente en poseer un vehículo de procedencia extranjera sin la documentación
que acredite su legal estancia en el país, se actualiza un concurso aparente de normas que debe resolverse
aplicando el principio de especialidad contenido en el artículo 6o. del Código Penal Federal, que esencialmente
implica preferir a la norma que describa más detalladamente la conducta. En congruencia con lo anterior, y
tomando en cuenta que existen preceptos que se refieren en específico a la conducta y mercancía señaladas y
que, por ende, habrá de preferirse su aplicación respecto del tipo genérico relativo a la posesión de mercancía
extranjera, se concluye que el delito de contrabando equiparado previsto en la fracción I del artículo 105 del
Código Fiscal de la Federación no se configura cuando el sujeto activo se encuentra en posesión de un vehículo
de procedencia extranjera sin la documentación que acredite su legal estancia en el país, sino que, en todo caso,
se actualizan los tipos relativos al contrabando básico, contrabando presunto o contrabando equiparado a que se
refieren los artículos 102, 103, fracción II, o 105, fracción VII, del aludido Código, respectivamente,
dependiendo de las circunstancias específicas en que se haya cometido el ilícito. Esto es, si el sujeto activo se
encuentra en posesión de este tipo de vehículos dentro de la zona de veinte kilómetros que señala el citado
artículo 103, fracción II, sin la documentación que acredite su tránsito por dicha zona o por el resto del país, se
actualiza el delito de contrabando básico (artículo 102); si se encuentra fuera de tal zona sin la documentación
que acredite los trámites aduanales para su introducción al territorio nacional o para su internación de la franja o
región fronteriza al resto del país, se configura el ilícito de contrabando presunto (fracción II del artículo 103), y
cuando la posesión es respecto de un vehículo importado en franquicia, importado a la franja fronteriza, o
importado o internado temporalmente pero sin autorización legal para ello, el delito que se actualiza es el
contrabando equiparado (fracción VII del artículo 105).

Contradicción de tesis 45/2006-PS. Entre las sustentadas por el Tribunal Colegiado del Décimo Noveno
Circuito y el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Segundo Circuito. 8 de noviembre de 2006.
Cinco votos. Ponente: Juan N. Silva Meza. Secretario: Roberto Ávila Ornelas.- Tesis de jurisprudencia
104/2006. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha veintidós de noviembre de
dos mil seis.

48
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

49. De conformidad al principio acusatorio contenido en el artículo 21 constitucional, el Ministerio


Público tiene la obligación de recabar las pruebas necesarias para acreditar el cuerpo del delito y la
responsabilidad del inculpado.

Ahora bien, si para cumplir con esa obligación el Ministerio Público requiere recabar la declaración del
inculpado, y para lograrlo gira una orden de localización, búsqueda y presentación de éste para que
declare dentro de la averiguación previa, ¿puede estimarse que esa orden implica una detención?

A. Sí implica una detención, pues si bien no se trata de una privación total de la libertad, sí trae consigo
una restricción de ella.
B. Sí implica una detención, porque acorde a lo previsto por el artículo 16 de nuestra Carta Magna, el
Ministerio Público está impedido para obtener coactivamente la comparecencia a declarar del
implicado en los hechos que investiga.
C. No implica una detención, pues únicamente constituye una diligencia más para integrar el material
probatorio que el Ministerio Público debe allegar dentro de esta fase procesal.

Justificación:

Novena Época. Registro: 180847. Instancia: Primera Sala. Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, tomo XX, agosto de 2004, materia(s): Penal. Tesis: 1a./J. 52/2004, página: 212.

ORDEN DE BÚSQUEDA, LOCALIZACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL INDICIADO PARA


DECLARAR DENTRO DE LA AVERIGUACIÓN PREVIA. ES UNA DILIGENCIA QUE INTEGRA
EL MATERIAL PROBATORIO EN DICHA FASE. El principio acusatorio contenido en el artículo 21 de
la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos obliga al Ministerio Público a que antes de ejercer
la acción penal, esto es, hacer la acusación correspondiente, realice la investigación y persecución del delito,
lo que se traduce en una facultad y una obligación consistente en recabar el acervo probatorio suficiente para
demostrar el cuerpo del delito y la responsabilidad del inculpado. En esas circunstancias, la orden de
localización, búsqueda y presentación del indiciado para que declare dentro de la averiguación previa no es
otra cosa que una diligencia más para integrar el material probatorio que el Ministerio Público debe allegar
dentro de esta fase procesal, para obtener los elementos suficientes para ejercer la acción penal.

Contradicción de tesis 80/2003-PS. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal Colegiado del Vigésimo
Circuito, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito y el Tercer Tribunal Colegiado
en Materia Penal del Primer Circuito. 2 de junio de 2004. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Humberto
Román Palacios. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretaria: Eunice Sayuri Shibya Soto.

Tesis de jurisprudencia 52/2004. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha dos
de junio de dos mil cuatro.

Asimismo, la parte conducente de la ejecutoria que resolvió la contradicción de tesis 80/2003-PS, dice:
“(…) Además, debe precisarse que esa orden que se analiza tampoco se traduce en una orden de
detención, pues si bien es cierto que se le cita al indiciado para que comparezca dentro de la
averiguación previa a declarar, ello únicamente constituye un acto de molestia que se contempla en el
artículo 16 constitucional, el cual tiene como requisitos de validez que sea (I) emitido por la autoridad
competente y (II) que se funde la causa legal del procedimiento.

En efecto, si como ya se dijo, esa orden no es otra cosa que un elemento más del acervo probatorio que
debe allegar el Ministerio Público dentro de la averiguación previa y que tiene como finalidad otorgar
el derecho de defensa al indiciado, además de obtener su declaración para reunir mayores elementos que,
concatenados entre sí evidencien los elementos del cuerpo del delito y la probable responsabilidad o, en su
caso la falta de elementos para ejercer la acción constitucional, es evidente que no se trata de una orden de
detención, pues no tiene como objeto privar de la libertad al inculpado, y si bien resulta cierto que
momentáneamente estará sujeto a las diligencias correspondientes a la presentación ante el Ministerio Público
y la correspondiente declaración en su caso, de ello no se sigue que se le esté coartando su libertad, pues la
naturaleza de esa orden y la actuación respectiva, tienen como consecuencia que en cuanto se lleven a cabo, la
persona citada pueda reintegrarse a sus actividades cotidianas.(…)”

49
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

50. Diga si es jurídicamente correcta la siguiente afirmación: “En materia penal federal los medios de
apremio de que disponen los tribunales para hacer cumplir sus determinaciones pueden emplearse
respecto de los agentes del Ministerio Público, defensores y los peritos.”

A. Es jurídicamente correcta.
B. Es jurídicamente incorrecta, ya que los medios de apremio sólo pueden emplearse respecto de los
defensores y los peritos, no así respecto de los agentes del Ministerio Público.
C. Es jurídicamente incorrecta, ya que los medios de apremio únicamente pueden emplearse respecto de
los peritos, no así respecto de los agentes del Ministerio Público ni de los defensores.

Justificación:

Código Federal de Procedimientos Penales.


(Reforma publicada en el D.O.F. el 23 de enero de 2009)

“Artículo 44. El Ministerio Público en la averiguación previa, y los tribunales, podrán emplear, para hacer
cumplir sus determinaciones, los siguientes medios de apremio:

(REFORMADA, D.O.F. 23 DE ENERO DE 2009)


I. Apercibimiento;

(REFORMADA, D.O.F. 23 DE ENERO DE 2009)


II. Multa por el equivalente a entre treinta y cien días de salario mínimo vigente en el momento y lugar en que
se realizó o se omitió realizar la conducta que motivó el medio de apremio. Tratándose de jornaleros, obreros
y trabajadores la multa no deberá exceder de un día de salario y tratándose de trabajadores no asalariados el
de un día de su ingreso;

(REFORMADA, D.O.F. 23 DE ENERO DE 2009)


III. Auxilio de la fuerza pública, y

(ADICIONADA, D.O.F. 23 DE ENERO DE 2009)


IV. Arresto hasta de treinta y seis horas.

(ADICIONADO, D.O.F. 23 DE ENERO DE 2009)


La atribución prevista en este artículo podrá emplearla el Tribunal respecto de los agentes del
Ministerio Público, defensores y los peritos.

(ADICIONADO, D.O.F. 23 DE ENERO DE 2009)


El Ministerio Público o el Tribunal podrán dar vista a las autoridades competentes en materia de
responsabilidad administrativa o penal que en su caso proceda.”

50
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

51. Los artículos 108 y 109, fracción I, del Código Fiscal de la Federación, dicen: “Artículo 108. Comete
el delito de defraudación fiscal quien con uso de engaños o aprovechamiento de errores, omita total o
parcialmente el pago de alguna contribución u obtenga un beneficio indebido con perjuicio del fisco federal.-
La omisión total o parcial de alguna contribución a que se refiere el párrafo anterior comprende,
indistintamente, los pagos provisionales o definitivos o el impuesto del ejercicio en los términos de las
disposiciones fiscales. (…)”

“Artículo 109. Será sancionado con las mismas penas del delito de defraudación fiscal, quien:
I. Consigne en las declaraciones que presente para los efectos fiscales, deducciones falsas o ingresos
acumulables menores a los realmente obtenidos o determinados conforme a las leyes. (…)”

Ahora bien, un juez dictó auto de formal prisión al inculpado por su probable responsabilidad en la
comisión de los delitos de fraude genérico y fraude equiparado previstos, respectivamente, en los
artículos 108 y 109 fracción I del Código Fiscal de la Federación. En tal supuesto ¿es procedente la
subsunción de delitos?

A. No es procedente la subsunción del equiparado en el genérico, porque el delito de defraudación fiscal


genérico o principal previsto en el artículo 108 del Código Fiscal de la Federación, difiere del
equiparado contenido en el artículo 109, fracción I, del propio código, al variar los elementos para su
integración.
B. Sí es procedente tanto la subsunción del delito de fraude genérico en el de fraude equiparado, como
la del equiparado en el genérico, según sea el caso.
C. Sí es procedente la subsunción, pero sólo la del delito de fraude equiparado contenido en el artículo
109, fracción I, del Código Fiscal de la Federación en el de fraude genérico previsto en el artículo 108
del propio Código.

Justificación:

Registro: 183535. Novena Época. Instancia: Primera Sala. Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta. XVIII, Agosto de 2003. Materia(s): Penal. Tesis: 1a./J. 38/2003. Página: 83

FRAUDE FISCAL GENÉRICO PREVISTO EN EL ARTÍCULO 108 DEL CÓDIGO FISCAL DE LA


FEDERACIÓN. NO PROCEDE LA SUBSUNCIÓN EN ÉL, DEL EQUIPARADO CONTENIDO EN
EL ARTÍCULO 109, FRACCIÓN I, DEL PROPIO CÓDIGO. De lo dispuesto en los artículos
mencionados, se desprende que el legislador estableció dos delitos distintos, con características y elementos
propios y diversos entre sí, es decir, con independencia y autonomía en cuanto a su existencia, de manera que
el delito de defraudación fiscal genérico o principal previsto en el artículo 108 del Código Fiscal de la
Federación, difiere del equiparado contenido en el artículo 109, fracción I, del propio código, ya que para que
se actualice este último se requiere que alguien presente declaraciones para efectos fiscales, que contengan
deducciones falsas o ingresos menores a los realmente obtenidos o determinados por ley; mientras que el
delito de defraudación fiscal genérico o principal se actualiza cuando una persona con uso de engaños o al
aprovechar errores omite el pago parcial o total de una contribución u obtiene un beneficio indebido en
perjuicio del fisco federal, es decir, no precisa que tenga que ser mediante declaración como en el equiparado,
por lo que podría configurarse mediante alguna otra forma; no obstante que ambos delitos tengan como nota
común el referido perjuicio. Por tanto, en atención a lo establecido en el párrafo tercero del artículo 14 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en cuanto a que en los juicios del orden criminal
queda prohibido imponer por simple analogía, y aun por mayoría de razón, pena alguna que no esté decretada
por una ley exactamente aplicable al delito de que se trata, debe estimarse que en el delito de defraudación
fiscal contenido en el artículo 108 del código indicado, no cabe la subsunción o no puede ser absorbido el
diverso delito de defraudación fiscal equiparado, previsto en el artículo 109, fracción I, del ordenamiento
legal en cita, pues, se reitera, varían los elementos para su integración.

Contradicción de tesis 103/2002-PS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia
Penal del Tercer Circuito y el entonces Segundo Tribunal Colegiado del Segundo Circuito (actualmente
Primer Tribunal Colegiado en Materia Civil del propio circuito). 2 de julio de 2003. Cinco votos. Ponente:
José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretario: Ismael Mancera Patiño.

Tesis de jurisprudencia 38/2003. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de dos de
julio de dos mil tres.

51
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

52. Si al dictarse sentencia en un proceso penal federal se concede al sentenciado el beneficio de la


condena condicional, ¿en qué casos corresponde al juzgador determinar si para su goce el sentenciado
debe otorgar garantía o sujetarse a las medidas que para tal efecto se le fijen?

A. En todos los casos.


B. Sólo en aquellos casos en que el sentenciado no manifieste ante el juez de la causa cuál es el medio o
medidas que estima podría cumplir para gozar del beneficio de mérito.
C. En ningún caso.

Justificación:

No. Registro: 176355


Jurisprudencia
Materia(s): Penal
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXIII, Enero de 2006
Tesis: 1a./J. 162/2005
Página: 207

CONDENA CONDICIONAL. CORRESPONDE AL JUEZ DETERMINAR SI PARA SU GOCE EL


SENTENCIADO DEBE OTORGAR GARANTÍA O SUJETARSE A LAS MEDIDAS QUE SE LE
FIJEN (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO 90, FRACCIÓN II, INCISO A), DEL CÓDIGO
PENAL FEDERAL). Conforme al citado precepto, el disfrute de los beneficios de la condena condicional
está sujeto al cumplimiento de requisitos legales, en tanto que no constituye un derecho establecido a
favor del sentenciado, sino un beneficio cuyo otorgamiento queda al prudente arbitrio del juzgador, por
lo que también corresponde a éste determinar si para su goce el sentenciado deberá otorgar garantía o
sujetarse a las medidas fijadas para tal efecto, pues al tratarse de un beneficio cuya concesión no es
obligatoria, sólo el Juez puede decidir cuál de los requisitos contenidos en el artículo 90, fracción II, inciso a),
del Código Penal Federal es el más idóneo para el caso concreto, considerando las circunstancias particulares.

Contradicción de tesis 104/2005-PS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia
Penal del Sexto Circuito y el Segundo Tribunal Colegiado del Décimo Primer Circuito. 19 de octubre de
2005. Cinco votos. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Mariana Mureddu
Gilabert.

Tesis de jurisprudencia 162/2005. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
dieciséis de noviembre de dos mil cinco.

52
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

53. ¿Qué se necesita para que el juzgador declare legalmente procedente la traslación de un tipo penal
especial a otro?

A. Que ambos tipos penales contengan una estructura jurídica binaria.


B. Que previamente se determine si la conducta que inicialmente fue estimada como delictiva conforme
a la legislación punitiva vigente a la fecha de su comisión, continúa siéndolo en términos del nuevo
ordenamiento, así como analizar los elementos que determinaron la configuración del ilícito conforme
a su tipificación derogada frente a la nueva legislación, pues sólo así podrá concluirse si se mantienen
los mismos elementos típicos del delito.
C. Que la reubicación del tipo en el nuevo ordenamiento penal, por sí sola implique la despenalización
de la conducta tipificada.

Justificación: Registro: 176787. Jurisprudencia. Materia(s): Penal. Novena Época. Instancia: Primera Sala.
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XXII, Octubre de 2005. Tesis: 1a./J.107/2005.
Página: 594.

TRASLACIÓN DEL TIPO. ES LEGALMENTE POSIBLE ENTRE LA CONDUCTA DE FRAUDE


ESPECÍFICO PREVISTA EN EL ARTÍCULO 194, FRACCIÓN XVIII Y LA CONTENIDA EN EL
ARTÍCULO 246-E (CÓDIGO PENAL DEL ESTADO DE QUERÉTARO). Para que sea legalmente
procedente la traslación de un tipo penal a otro es necesario que previamente se determine si la conducta que,
inicialmente, fue estimada como delictiva conforme a la legislación punitiva vigente en la fecha de su
comisión, continúa siéndolo en términos del nuevo ordenamiento, así como analizar los elementos que
determinaron la configuración del ilícito conforme a su tipificación derogada, frente a la nueva legislación,
pues sólo así podrá concluirse si se mantienen los mismos elementos típicos del delito. Del análisis estructural
del tipo penal contenido en el artículo 194, fracción XVIII que preveía el delito de fraude específico,
derogado por decreto de veintitrés de agosto de dos mil dos y del tipo penal contenido en el artículo 246-E,
que prevé el delito contra la seguridad y el orden en el desarrollo urbano, ambos del Código Penal para el
Estado de Querétaro, se desprende que la conducta tipificada en ambos numerales, consistente en transferir o
prometer transferir la propiedad, la posesión o cualquier derecho sobre uno o más lotes, resultado de
fraccionar un predio, sin la autorización previa de la autoridad competente, contiene esencialmente los
mismos elementos constitutivos del tipo penal, por lo que la misma sigue siendo delictiva. Lo anterior, en
virtud de que la mera reubicación del tipo en el ordenamiento penal, no implica que se haya despenalizado la
conducta tipificada, pues ésta continúa considerándose como delictiva por los legisladores; tanto es así, que la
reforma, según su exposición de motivos, tuvo por objeto depurar la forma en que se prevé y castiga la
conducta y ubicar el tipo en forma correcta en el Código Penal, y si bien es cierto que se colocó en un título
distinto con el propósito de proteger la seguridad y el orden en el desarrollo urbano, ello no implica que se
haya desprotegido el patrimonio de los particulares que son víctimas de dicha conducta, ya que en todo
momento tendrán derecho a solicitar la reparación del daño causado. Aunado a lo anterior, es de hacerse notar
que el tipo de fraude específico no requiere para su configuración el que se acredite alguno de los medios que
la propia ley exige para el delito de fraude genérico, esto es, que el sujeto activo engañe o provoque una falsa
concepción de la realidad, ni de que se aproveche del error de persona alguna. A pesar de lo anterior, cabe
señalar que el artículo 246-E, a diferencia del precepto derogado, prevé una causa de exclusión del delito que
se actualiza cuando un ascendiente transfiera la propiedad o posesión de partes de un inmueble a sus
descendientes, y éstos cumplan con las normas aplicables según el tipo de propiedad de que se trate, tanto
para escriturarlas a su favor y para ceder sus derechos a tercero. De ahí que la conducta recién descrita,
anteriormente constitutiva del delito de fraude específico, ya no pueda considerarse como tal, esto es, que en
ese único supuesto no es legalmente procedente la traslación del tipo.

Contradicción de tesis 20/2005-PS. Entre las sustentadas por el Primero y el Segundo Tribunales Colegiados
del Vigésimo Segundo Circuito. 29 de junio de 2005. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: José de Jesús
Gudiño Pelayo. Ponente: José Ramón Cossío Díaz. Secretario: Miguel Enrique Sánchez Frías.

Tesis de jurisprudencia 107/2005. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
trece de julio de dos mil cinco.

53
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

54. El vigente artículo 194, fracción I, última parte, del Código Penal Federal estatuye:

ARTÍCULO 194.- (…) El comercio y suministro de narcóticos podrán ser investigados, perseguidos y, en su
caso sancionados por las autoridades del fuero común en los términos de la Ley General de Salud, cuando se
colmen los supuestos del artículo 474 de dicho ordenamiento; (…)

Ahora bien, considerando lo previsto en el artículo 474 de la Ley General de Salud, diga usted cuáles
son los requisitos exigidos para que una autoridad judicial del fuero común pueda conocer, por regla
general, del comercio y suministro de narcóticos.

A. Que el narcótico objeto del delito esté previsto en la tabla de estupefacientes establecida en la Ley
General de Salud, que la cantidad de dicho narcótico sea inferior a la que resulte de multiplicar por
mil el monto de las previstas en la citada tabla de estupefacientes, y no existan elementos suficientes
para presumir delincuencia organizada.
B. Sólo que el narcótico (cualquiera) objeto del delito, sea inferior a la cantidad que resulte de
multiplicar por mil el monto de las previstas en la tabla de estupefacientes establecida en la Ley
General de Salud y no existan elementos suficientes para presumir delincuencia organizada.
C. Únicamente que el narcótico objeto del delito esté previsto en la tabla de estupefacientes establecida
en la Ley General de Salud y que la cantidad de dicho narcótico sea inferior a la que resulte de
multiplicar por mil el monto de las previstas en la citada tabla de estupefacientes.

Justificación: Los artículos 474, párrafo primero, y 479 de la Ley General de Población establecen:

ARTICULO 474.- Las autoridades de seguridad pública, procuración e impartición de justicia, así como de
ejecución de sanciones de las entidades federativas, conocerán y resolverán de los delitos o ejecutarán las
sanciones y medidas de seguridad a que se refiere este capítulo, cuando los narcóticos objeto de los mismos
estén previstos en la tabla, siempre y cuando la cantidad de que se trate sea inferior a la que resulte de
multiplicar por mil el monto de las previstas en dicha tabla y no existan elementos suficientes para
presumir delincuencia organizada (…)

ARTÍCULO 479.- Para los efectos de este capítulo se entiende que el narcótico está destinado para su estricto
e inmediato consumo personal, cuando la cantidad del mismo, en cualquiera de sus formas, derivados o
preparaciones no exceda de las previstas en el listado siguiente:

Tabla de Orientación de Dosis Máximas de Consumo Personal e Inmediato


Narcótico Dosis máxima de consumo personal e inmediato
Opio 2 gr.
Diacetilmorfina o Heroína 50 mg.
Cannabis Sativa, Indica o Mariguana 5 gr.
Cocaína 500 mg.
Lisergida (LSD) 0.015 mg.
MDA, Polvo, granulado o cristal Tabletas o cápsulas
Una unidad con peso no mayor
40 mg.
Metilendioxianfetamina a 200 mg.
MDMA, dl-34-metilendioxi-n- Una unidad con peso no mayor
40 mg.
dimetilfeniletilamina a 200 mg.
Una unidad con peso no mayor
Metanfetamina 40 mg.
a 200 mg.

54
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

55. Un juez de distrito con residencia en el lugar de comisión de un delito federal, por razones de
seguridad, estimó necesario trasladar al procesado a un centro de reclusión de máxima seguridad. El
mencionado juzgador consideró competente para conocer del asunto al juez del lugar en que se ubica el
centro de reclusión; este último aceptó la competencia. Ahora bien, diga si el juez del lugar donde se
ubica el centro de reclusión puede legalmente declararse incompetente por declinatoria.

A. Sí puede declararse incompetente por declinatoria.


B. No puede declararse incompetente por declinatoria.
C. Puede declararse incompetente sólo si quien promueve la declinatoria es el procesado o su defensor.

Justificación:

Código Federal de Procedimientos Penales.


(Reforma publicada en el D.O.F. el 23 de enero de 2009)

“Artículo 10. Es competente para conocer de los delitos continuados y de los continuos o permanentes,
cualquiera de los tribunales cuyo territorio aquéllos produzcan efectos o hayan realizado actos constitutivos
de tales delitos.

En caso de concurso de delitos, el Ministerio Público Federal será competente para conocer de los delitos del
fuero común que tengan conexidad con delitos federales, y los jueces federales tendrán, asimismo,
competencia para juzgarlos.

También será competente para conocer de un asunto, un juez de distrito distinto al del lugar de comisión del
delito, atendiendo a las características del hecho imputado, a las circunstancias personales del inculpado, por
razones de seguridad en las prisiones o por otras que impidan garantizar el desarrollo adecuado del proceso,
cuando el Ministerio Público de la Federación considere necesario llevar el ejercicio de la acción penal ante
otro juez. Lo anterior es igualmente aplicable para los casos en que, por las mismas razones la
autoridad judicial, de oficio o a petición de parte, estime necesario trasladar a un procesado a algún
centro de reclusión de máxima seguridad, en los que será competente el tribunal del lugar en que se
ubique dicho centro.

En estos supuestos no procede la declinatoria.”

55
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

56. Un juez de procedimientos penales federales, al resolver la situación jurídica del inculpado respecto
del delito de defraudación fiscal, previsto en el artículo 108, fracción III, del Código Fiscal de la
Federación, decretó el sobreseimiento, dado que consideró que la acción penal había prescrito y, por
ende, que la responsabilidad penal se había extinguido. La determinación del juez se sustentó en que la
querella se presentó fuera del plazo de cinco años a que se refiere el artículo 100 del mismo
ordenamiento. En el caso, el delito se ejecutó el 30 de diciembre de 1996, la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público tuvo conocimiento del delito y del delincuente el 15 de diciembre de 2001 y la querella
se presentó el 14 de noviembre de 2004. Ahora bien, de acuerdo con el criterio jurisprudencial del
Máximo Tribunal que interpreta el artículo 100 del Código Fiscal de la Federación, cómo calificaría
este pronunciamiento:

A. Jurídicamente correcto, porque en el caso transcurrieron más de 5 años a partir de la fecha en que se
cometió el delito.
B. Jurídicamente incorrecto, porque la referida Secretaría tuvo conocimiento del delito y del delincuente
dentro del periodo de 5 años a partir de la fecha de la comisión del delito.
C. Jurídicamente incorrecto, porque el juez no tomó en cuenta las reglas de prescripción de la acción
penal previstas en el Código Penal Federal.

Justificación: Registro: 173510. Novena Época. Instancia: Primera Sala. Jurisprudencia. Fuente: Semanario
Judicial de la Federación y su Gaceta. XXV, Enero de 2007. Materia(s): Penal. Tesis: 1a./J. 73/2006. Página:
322

PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN PENAL EN EL DELITO DE DEFRAUDACIÓN FISCAL. SI


ANTES DE QUE TRANSCURRAN CINCO AÑOS DESDE SU COMISIÓN LA SECRETARÍA DE
HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO TIENE CONOCIMIENTO DEL ILÍCITO Y DE SU AUTOR,
AQUÉLLA SE ACTUALIZARÁ EN UN PLAZO DE TRES AÑOS CONTADOS A PARTIR DE ESE
MOMENTO (INTERPRETACIÓN DEL ARTÍCULO 100 DEL CÓDIGO FISCAL DE LA
FEDERACIÓN). La prescripción de la acción penal en el delito de defraudación fiscal perseguible por
querella formulada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público debe regirse conforme al artículo 100 del
Código Fiscal de la Federación, el cual establece dos reglas: la primera, que señala un plazo de tres años a
partir de que dicha Secretaría tenga conocimiento del delito y del delincuente; y la segunda, que prevé un
término de cinco años que se computará a partir de la fecha de la comisión del delito y que se actualiza
cuando la dependencia ofendida ignora el hecho delictuoso y su autor. Ahora bien, de la interpretación
armónica de dichos cómputos se advierte que si antes de que se cumplan los cinco años de la comisión del
delito la aludida Secretaría tiene conocimiento de éste y de su autor, la prescripción se computará conforme a
la primer regla (tres años a partir de ese momento), sin que sea posible tomar en cuenta la fecha de la
comisión del delito, pues ésta constituye un elemento de la segunda hipótesis. De manera que como ambos
supuestos se excluyen entre sí, no pueden conjugarse, pues ello implicaría condicionar dentro de una
disposición de aplicación estricta, un supuesto que el legislador no contempló; de ahí que basta que la
autoridad hacendaria tenga conocimiento del delito y de su autor dentro del plazo de cinco años previsto en la
segunda regla, para que el fenómeno extintivo de la acción penal se rija conforme al plazo de tres años,
aunque la fecha que resulte pudiera rebasar aquella en la que habría prescrito el delito conforme a la segunda
hipótesis. Lo anterior es así, en virtud de que la definición clara de dichas reglas revela que en esta clase de
delitos especiales, la intención del legislador consistió en que su prescripción fuera congruente con el término
de caducidad en materia fiscal, sin que ello implique que el plazo de tres años pueda empezar a contarse en
cualquier tiempo, sino que necesariamente tendrá que iniciar antes de que concluya el término de cinco años,
pues si excede de éste ya habrá prescrito la acción penal.

Contradicción de tesis 32/2006-PS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal
del Tercer Circuito y el Noveno Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito. 27 de septiembre
de 2006. Mayoría de tres votos. Disidentes: Sergio Armando Valls Hernández y José Ramón Cossío Díaz.
Ponente: Juan N. Silva Meza. Secretario: Eligio Nicolás Lerma Moreno.

Tesis de jurisprudencia 73/2006. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
cuatro de octubre de dos mil seis.

56
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

57. Conforme al criterio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ¿cuál o cuáles son las pruebas
idóneas para acreditar la reincidencia para efectos de la individualización de la pena?

A. Únicamente las copias autorizadas de sentencias condenatorias anteriores.


B. Únicamente las copias autorizadas de autos que declararon ejecutoriadas sentencias condenatorias
anteriores.
C. Tanto las copias autorizadas de sentencias condenatorias anteriores, así como las de los autos que las
declararon ejecutoriadas.

Justificación:

No. Registro: 193700


Jurisprudencia
Materia(s): Penal
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
X, Julio de 1999
Tesis: 1a./J. 33/99
Página: 37

REINCIDENCIA. SU ACREDITACIÓN PUEDE REALIZARSE CON LAS COPIAS


AUTORIZADAS DE SENTENCIAS CONDENATORIAS ANTERIORES, ASÍ COMO DE LOS
AUTOS QUE LAS DECLARAN EJECUTORIADAS, O POR OTROS ELEMENTOS DE PRUEBA,
QUE VALORADOS EN SU CONJUNTO LA ACREDITEN DE MANERA INDUBITABLE. La
reincidencia, para efectos de la individualización de la pena o cualquier otro que resulte en el procedimiento,
puede acreditarse con las copias autorizadas de las sentencias condenatorias anteriores, así como con los
autos que las declararon ejecutoriadas, por ser las pruebas idóneas o eficaces para llegar a dicha
determinación; sin embargo, ello no resulta un obstáculo para que mediante otros elementos de prueba, que
valorados en su conjunto, puedan llevar a la convicción de que quedó acreditado de manera indubitable dicho
extremo.

Contradicción de tesis 83/97. Entre las sustentadas por el Tribunal Colegiado en Materia Penal del Séptimo
Circuito y el Tribunal Colegiado del Vigésimo Circuito (hoy Primer Tribunal). 12 de mayo de 1999. Cinco
votos. Ponente: Juan N. Silva Meza. Secretario: Carlos M. Padilla P. Vertti.

Tesis de jurisprudencia 33/99. Aprobada por la Primera Sala de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación,
en sesión de dos de junio de mil novecientos noventa y nueve, por unanimidad de cinco votos de los señores
Ministros: presidente Humberto Román Palacios, Juventino V. Castro y Castro, José de Jesús Gudiño Pelayo,
Juan N. Silva Meza y Olga Sánchez Cordero de García Villegas.

57
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

58. En materia penal federal, ¿cómo deben tramitarse los incidentes sobre competencia, por cuerda
separada o en el mismo expediente?

A. En todos los casos, dichos incidentes se deben tramitar por cuerda separada.
B. La inhibitoria se debe tramitar por cuerda separada, mientras que la declinatoria se debe tramitar en el
mismo expediente.
C. En todos los casos, dichos incidentes se deben tramitar dentro del mismo expediente.

Justificación:

Código Federal de Procedimientos Penales:

Artículo 438.- Los incidentes sobre competencias se tramitarán siempre por separado.

58
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

59. Lea el siguiente artículo del Código Federal de Procedimientos Penales.

Artículo 119. Cuando la denuncia o la querella se presenten por escrito, el servidor público que conozca de la
averiguación, deberá asegurarse de la identidad del denunciante o querellante, de la legitimación de este
último, así como de la autenticidad de los documentos en que aparezca formulada la querella y en los que se
apoyen ésta o la denuncia.

Ahora bien, ¿en qué casos, para comprobar la legitimación del servidor público que formula la querella
en representación de una persona moral oficial, el Ministerio Público está facultado para verificar si el
funcionario que designó en su cargo al querellante, estaba facultado para ello?

A. En todos los casos.


B. Cuando la representación social recepcionaria de una querella por escrito, lo considere necesario.
C. En ningún caso.

Justificación:

No. Registro: 177856


Jurisprudencia
Materia(s): Penal
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXII, Julio de 2005
Tesis: 1a./J. 70/2005
Página: 247

QUERELLA FORMULADA POR UN SERVIDOR PÚBLICO. PARA EFECTOS DE VERIFICAR SU


LEGITIMACIÓN, EL MINISTERIO PÚBLICO SÓLO DEBE CERCIORARSE DE QUE LA
LEGISLACIÓN APLICABLE SE LO PERMITA, SIN QUE ELLO IMPLIQUE ANALIZAR LAS
FACULTADES DE QUIEN LE OTORGÓ SU NOMBRAMIENTO. La presentación debida de la
querella es un presupuesto procesal indispensable en los delitos perseguibles a petición de parte, por lo que es
evidente que cuando un servidor público la formule, el Ministerio Público, para poder ejercitar la acción
penal, sólo debe cerciorarse de que aquél está legitimado para ello en términos de la normativa específica que
regule su actividad, sin que ello implique verificar la legitimidad de su nombramiento como tal, esto es,
si el funcionario que lo designó en el cargo estaba facultado para hacerlo, pues ese requisito no lo exige
el artículo 119 del Código Federal de Procedimientos Penales, el cual sólo obliga a la representación social
recepcionaria de una querella por escrito a que se cerciore de la identidad del querellante, de que éste está
legitimado para formular querellas, y de la autenticidad de los documentos en que aparezca formulada y en
los que se apoye ésta; de ahí que baste con que la legislación aplicable le permita al servidor público formular
querella para que se tenga por cumplido el requisito de la legitimación.

Contradicción de tesis 16/2005-PS. Entre las sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal
del Cuarto Circuito, el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito y el Segundo Tribunal
Colegiado en Materia Penal del Tercer Circuito. 8 de junio de 2005. Cinco votos. Ponente: Juan N. Silva
Meza. Secretario: Roberto Ávila Ornelas.

Tesis de jurisprudencia 70/2005. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha ocho
de junio de dos mil cinco.

59
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

60. José Soto fue detenido el seis de septiembre de dos mil nueve en posesión de un envoltorio con
mariguana cuyo peso neto no excede de 500 veces la cantidad considerada para consumo personal e
inmediato. Diga, por regla general, qué autoridad jurisdiccional debe conocer del proceso penal que en
su caso se instaure.

A. Un juez del fuero común.


B. Un juez del fuero común o un juez federal a elección del Ministerio Público del orden común o del
inculpado.
C. En todos los casos un juez del fuero federal.

Justificación:

Código Penal Federal


(Reforma publicada en el D.O.F. el 20 de agosto de 2009)

“Artículo 195 bis. (…)


La posesión de narcóticos podrá ser investigada, perseguida y, en su caso sancionada por las autoridades del
fuero común en los términos de la Ley General de Salud, cuando se colmen los supuestos del artículo 474 de
dicho ordenamiento.”

Ley General de Salud


(Reforma publicada en el D.O.F. el 20 de agosto de 2009)

“Artículo 474.- Las autoridades de seguridad pública, procuración e impartición de justicia, así como de
ejecución de sanciones de las entidades federativas, conocerán y resolverán de los delitos o ejecutarán las
sanciones y medidas de seguridad a que se refiere este capítulo, cuando los narcóticos objeto de los mismos
estén previstos en la tabla, siempre y cuando la cantidad de que se trate sea inferior a la que resulte de
multiplicar por mil el monto de las previstas en dicha tabla y no existan elementos suficientes para
presumir delincuencia organizada.

Las autoridades federales conocerán de los delitos en cualquiera de los casos siguientes:

I. En los casos de delincuencia organizada. (…)”

60
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

61. Tratándose del acto jurídico administrativo de expropiación, cuando el Estado no ha ocupado
físicamente el inmueble, debe considerarse que el antiguo propietario:

A. No conserva ninguna calidad porque se ha extinguido el derecho real de la propiedad


B. Solamente tendrá a su disposición la acción derivada del hecho jurídico de la posesión con facultades
restringidas a percibir los frutos civiles por concepto de rentas producidas, en el caso de que el bien
expropiado se hubiere arrendado con anterioridad a la expropiación
C. Conserva su calidad de poseedor originario del bien, posesión de buena fe y derivada de un título
traslativo de dominio

Justificación

Registro: 163639
Novena Época
Instancia: Primera Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXXII, Octubre de 2010,
Materia(s): Civil
Tesis: 1a./J. 50/2010
Página: 63

EXPROPIACIÓN DE BIENES ARRENDADOS. SUPUESTOS EN LOS QUE EL PARTICULAR


PRIVADO DE SU DERECHO REAL DE PROPIEDAD (ARRENDADOR), PUEDE PERCIBIR EL
PAGO DE LAS RENTAS VENCIDAS. El acto jurídico administrativo de expropiación tiene como efecto
jurídico la extinción del derecho real de propiedad, y en caso de que el inmueble expropiado sea objeto de un
contrato de arrendamiento, éste también se extingue por virtud de aquel acto, de manera que quien es dueño y
arrendador no tiene acción contractual para reclamar el pago de rentas. Sin embargo, cuando subsiste la
situación de hecho, consistente en que quien fue arrendatario siga beneficiándose del uso y goce del bien
expropiado porque el Estado no lo ha ocupado físicamente, se producen también consecuencias jurídicas. En
efecto, debe considerarse que el antiguo propietario conserva su calidad de poseedor originario del bien,
posesión de buena fe y derivada de un título traslativo de dominio, de manera que tiene a su disposición la
acción derivada del hecho jurídico de la posesión, con facultades, por ministerio de ley, a percibir los frutos
civiles por concepto de las rentas producidas día a día por el uso y goce que beneficia al anterior arrendatario,
quien es poseedor derivado del bien, hasta que éste lo entregue, o el Estado ocupe físicamente el inmueble,
caso en el que cesa de hecho la posesión; o bien, cuando se ordene la desocupación y entrega del bien
expropiado, pues en ese momento deja de considerarse de buena fe la posesión. Mientras ello no suceda, las
rentas percibidas por el poseedor deberán regularse por las disposiciones que norman el contrato de
arrendamiento.

Contradicción de tesis 295/2009. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Tercero y Décimo
Segundo, ambos en Materia Civil del Primer Circuito. 21 de abril de 2010. Mayoría de tres votos. Disidentes:
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y José de Jesús Gudiño Pelayo. Ponente: Juan N. Silva Meza.
Secretario: Rodrigo de la Peza López Figueroa.

Tesis de jurisprudencia 50/2010. Aprobada por la Primera Sala de este Alto Tribunal, en sesión de fecha
nueve de junio de dos mil diez.

61
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

62. La Suprema Corte de Justicia de la Nación, a través de su jurisprudencia ha sostenido que el


concepto de utilidad pública no debe ser restringido, sino amplio, a fin de que el Estado pueda
satisfacer las necesidades sociales y económicas y que, genéricamente, comprende 3 causas:

A. a) La pública propiamente dicha; b) La social y c) La nacional


B. a) La social; b) La nacional y c) La económica
C. a) La pública; b) La social y c) La productiva

Justificación:

Registro: 175593
Novena Época
Instancia: Pleno
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXIII, Marzo de 2006,
Materia(s): Constitucional, Administrativa
Tesis: P./J. 39/2006
Página: 1412

EXPROPIACIÓN. CONCEPTO DE UTILIDAD PÚBLICA. La Suprema Corte de Justicia de la Nación, en


cuanto al concepto de utilidad pública, ha sustentado diversos criterios, en los que inicialmente señaló que las
causas que la originan no podrían sustentarse en dar a otro particular la propiedad del bien expropiado, sino
que debía ser el Estado, en cualquiera de sus tres niveles, quien se sustituyera como propietario del bien a fin
de conseguir un beneficio colectivo a través de la prestación de un servicio o realización de una obra públicos.
Posteriormente amplió el concepto comprendiendo a los casos en que los particulares, mediante la
autorización del Estado, fuesen los encargados de alcanzar los objetivos en beneficio de la colectividad. Así,
esta Suprema Corte reitera el criterio de que el concepto de utilidad pública es más amplio, al comprender no
sólo los casos en que el Estado (Federación, Entidades Federativas, Distrito Federal o Municipios) se
sustituye en el goce del bien expropiado a fin de beneficiar a la colectividad, sino además aquellos en que
autoriza a un particular para lograr ese fin. De ahí que la noción de utilidad pública ya no sólo se limita a que
el Estado deba construir una obra pública o prestar un servicio público, sino que también comprende aquellas
necesidades económicas, sociales, sanitarias e inclusive estéticas, que pueden requerirse en determinada
población, tales como empresas para beneficio colectivo, hospitales, escuelas, unidades habitacionales,
parques, zonas ecológicas, entre otros, dado que el derecho a la propiedad privada está delimitado en la
Constitución Federal en razón de su función social. Por ello, atendiendo a esa función y a las necesidades
socioeconómicas que se presenten, es evidente que no siempre el Estado por sí mismo podrá satisfacerlas,
sino que deberá recurrir a otros medios, como autorizar a un particular para que preste un servicio público o
realice una obra en beneficio inmediato de un sector social y mediato de toda la sociedad. En consecuencia, el
concepto de utilidad pública no debe ser restringido, sino amplio, a fin de que el Estado pueda satisfacer las
necesidades sociales y económicas y, por ello, se reitera que, genéricamente, comprende tres causas: a) La
pública propiamente dicha, o sea cuando el bien expropiado se destina directamente a un servicio u obra
públicos; b) La social, que satisface de una manera inmediata y directa a una clase social determinada, y
mediatamente a toda la colectividad; y c) La nacional, que satisface la necesidad que tiene un país de adoptar
medidas para hacer frente a situaciones que le afecten como entidad política o internacional.

Acción de inconstitucionalidad 18/2004. Diputados integrantes de la Quincuagésima Cuarta Legislatura del


Congreso del Estado de Colima. 24 de noviembre de 2005. Mayoría de nueve votos. Disidentes: José Ramón
Cossío Díaz y José de Jesús Gudiño Pelayo. Ponente: Juan N. Silva Meza. Secretaria: Laura García Velasco.

El Tribunal Pleno, el dieciséis de febrero en curso, aprobó, con el número 39/2006, la tesis jurisprudencial que
antecede. México, Distrito Federal, a dieciséis de febrero de dos mil seis.

62
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

63. Por regla general, las facultades de comprobación y determinación de la autoridad fiscal caducan
en cinco años. De acuerdo con el artículo 50 del Código Fiscal de la Federación, una vez que se levanta
el acta final de la visita, la autoridad fiscal cuenta con un plazo de seis meses para emitir y notificar la
resolución en que determine el crédito fiscal respecto de las contribuciones omitidas. Por otro lado, el
artículo 52 de la Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo establece un plazo de
cuatro meses para cumplir la sentencia en que se declare la nulidad para efectos de una resolución
administrativa.

En una sentencia dictada en un juicio contencioso administrativo, se declara la nulidad, para efectos, de
una resolución en que se determinó un crédito fiscal correspondiente a las contribuciones omitidas que
fueron detectadas en una visita domiciliaria.

¿Cuál es el plazo que tiene la autoridad administrativa para emitir la resolución de cumplimiento?

A. Cuatro meses.
B. Seis meses.
C. Cinco años.

Justificación:

Registro No. 164578. Localización: Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta. XXXI, Mayo de 2010. Página: 834. Tesis: 2a./J. 63/2010. Jurisprudencia. Materia(s):
Administrativa

JUICIO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO. LA AUTORIDAD FISCALIZADORA DEBE EMITIR LA


RESOLUCIÓN EN CUMPLIMIENTO DE UNA SENTENCIA DEFINITIVA EN LA QUE EL TRIBUNAL
FEDERAL DE JUSTICIA FISCAL Y ADMINISTRATIVA DECLARÓ LA NULIDAD PARA
DETERMINADOS EFECTOS, DENTRO DEL PLAZO DE 4 MESES, CONFORME AL ARTÍCULO 52
DE LA LEY FEDERAL DE PROCEDIMIENTO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO. El Tribunal
Federal de Justicia Fiscal y Administrativa funciona bajo un modelo de jurisdicción contencioso
administrativo mixto, al tener asignadas funciones de tribunal de mera anulación y de plena jurisdicción, de
forma que atiende tanto al control del acto de autoridad y a la tutela del derecho objetivo, como a la
protección de los derechos subjetivos del particular, destacadamente de la garantía de seguridad jurídica
prevista en el artículo 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Ahora bien, si
conforme al artículo 52, fracción III, de la Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo
(numeral 239, fracción III, del Código Fiscal de la Federación vigente hasta el 31 de diciembre de 2005), el
referido Tribunal emite una sentencia definitiva en la que declara la nulidad de la resolución impugnada para
determinados efectos, entonces la autoridad fiscalizadora debe emitir la resolución respectiva en el plazo
máximo de 4 meses. Lo anterior es así, porque si bien es cierto que la resolución impugnada tuvo su origen en
el ejercicio de las facultades que el artículo 50 del Código Fiscal de la Federación confiere a la autoridad
fiscalizadora, no menos lo es que se está frente a un supuesto distinto, es decir, de cumplimiento de una
sentencia en el que el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa emitió una sentencia definitiva en
la que declaró la nulidad de la resolución impugnada para determinados efectos, lo que es un presupuesto
necesario del hecho operativo de la norma establecida en el invocado artículo 52 de la Ley Federal de
Procedimiento Contencioso Administrativo (antes 239 del Código Fiscal de la Federación). Esto es, el hecho
de que el juicio de nulidad hubiere iniciado por la impugnación de un crédito fiscal derivado de un
procedimiento de fiscalización no implica que el plazo para el cumplimiento de una sentencia se rija por el
referido artículo 50 del Código que regula la facultad determinativa de la autoridad fiscalizadora, cuando
dicho plazo fue establecido por el legislador para una situación jurídica distinta de la del cumplimiento de una
sentencia, sino que debe aplicarse, precisamente, el plazo previsto en el artículo 52 de la Ley Federal de
Procedimiento Contencioso Administrativo (239 del Código), que establece específicamente el plazo para el
cumplimiento de una sentencia, el cual debe observarse de acuerdo con el derecho a la tutela jurisdiccional
efectiva establecido en el artículo 17 de la Constitución General de la República.

Contradicción de tesis 32/2010. Entre las sustentadas por el Primer Tribunal Colegiado del Trigésimo
Circuito y el entonces Tercer Tribunal Colegiado del Vigésimo Tercer Circuito, actualmente Segundo
Tribunal Colegiado del Trigésimo Circuito. 28 de abril de 2010. Unanimidad de cuatro votos. Ausente:
Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente: José Fernando Franco González Salas. Secretaria: Ileana Moreno
Ramírez.

Tesis de jurisprudencia 63/2010. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
doce de mayo de dos mil diez.

63
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

64. Las propuestas de cédulas de determinación de cuotas obrero patronales, emitidas por el Instituto
Mexicano del Seguro Social en términos del artículo 39A de la Ley del Seguro Social, ¿son impugnables
mediante el juicio contencioso administrativo federal?

A. No, ya que no constituyen resoluciones definitivas.


B. Sí, porque independientemente de su denominación, representan el producto final de un
procedimiento, que refleja la manifestación de voluntad de la autoridad administrativa.
C. Sólo son impugnables cuando lo contenido en ellas coincida con la determinación de cuotas obrero
patronales que realice el patrón.

Justificación:

No. Registro. 168437


Jurisprudencia.
Materia(s): Administrativa.
Novena Época.
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVIII, Noviembre de 2008.
Tesis: 2a./J. 158/2008.
Página: 231

PROPUESTAS DE CÉDULAS DE DETERMINACIÓN DE CUOTAS OBRERO PATRONALES


EMITIDAS EN TÉRMINOS DEL ARTÍCULO 39 A DE LA LEY DEL SEGURO SOCIAL. NO
CONSTITUYEN RESOLUCIONES DEFINITIVAS IMPUGNABLES ANTE EL TRIBUNAL FEDERAL
DE JUSTICIA FISCAL Y ADMINISTRATIVA. Conforme al artículo 11, fracción I, de la Ley Orgánica del
Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, vigente hasta el 6 de diciembre de 2007 (cuyo contenido
sustancial reproduce el artículo 14, fracción I, de la Ley Orgánica del indicado Tribunal, en vigor a partir del
7 de diciembre de 2007), el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa conocerá de los juicios
promovidos contra las resoluciones definitivas dictadas por autoridades fiscales federales y organismos
fiscales autónomos, en las cuales se determine la existencia de una obligación fiscal, se fije en cantidad
líquida o se den las bases para su liquidación. En ese sentido, tomando en consideración que de los artículos
39 a 39 C de la Ley del Seguro Social, se advierte que las propuestas de cédulas de determinación de cuotas
obrero patronales no representan el producto final de la manifestación de voluntad de la autoridad
administrativa, pues sólo tienen como propósito facilitar el cumplimiento de las obligaciones a cargo de los
patrones, debido a que existe la posibilidad de que paguen una cantidad mayor o menor al monto contenido en
dichas propuestas, por lo que debe concluirse que éstas, por sí mismas, no constituyen una resolución
definitiva que exprese la última voluntad de la autoridad y, por ende, resulta improcedente el juicio
contencioso administrativo promovido en su contra ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y
Administrativa.

Precedentes: Contradicción de tesis 145/2008-SS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en
Materia Administrativa del Segundo Circuito y el Tribunal Colegiado Auxiliar con sede en Naucalpan de
Juárez, Estado de México. 15 de octubre de 2008. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Mariano Azuela
Güitrón. Ponente: José Fernando Franco González Salas. Secretario: Jonathan Bass Herrera.

Tesis de jurisprudencia 158/2008. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintidós de octubre de dos mil ocho.

64
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

65. La nulidad, entendida en un sentido amplio, es la consecuencia de una declaración jurisdiccional


que priva de todo valor a los actos carentes de los requisitos de forma o fondo que marca la ley o que se
han originado en un procedimiento viciado. Ahora bien, la nulidad lisa y llana coincide con la nulidad
para efectos en la aniquilación total, la desaparición en el orden jurídico de la resolución o acto
impugnado, independientemente de la causa específica que haya originado ese pronunciamiento, pero
también existen diferencias, según la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
mencione señale en qué caso deberá decretarse la nulidad para efectos:

A. No existe autoridad competente


B. Existiendo fundamentos y motivos que puedan sustentar la resolución, se han extinguido las
facultades de la autoridad competente
C. Cuando se violó el procedimiento

Justificación:

Registro: 170684
Novena Época
Instancia: Pleno
Tesis Aislada
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXVI, Diciembre de 2007,
Materia(s): Administrativa
Tesis: P. XXXIV/2007
Página: 26

NULIDAD ABSOLUTA Y NULIDAD PARA EFECTOS EN EL JUICIO CONTENCIOSO


ADMINISTRATIVO. SU ALCANCE DEPENDE DE LA NATURALEZA DE LA RESOLUCIÓN
ANULADA Y DE LOS VICIOS QUE ORIGINARON LA ANULACIÓN. La nulidad, entendida en un
sentido amplio, es la consecuencia de una declaración jurisdiccional que priva de todo valor a los actos
carentes de los requisitos de forma o fondo que marca la ley o que se han originado en un procedimiento
viciado. Ahora bien, la ley contempla dos clases de nulidad: la absoluta, calificada en la práctica
jurisdiccional como lisa y llana, que puede deberse a vicios de fondo, forma, procedimiento o, incluso, a la
falta de competencia, y la nulidad para efectos, que normalmente ocurre en los casos en que el fallo
impugnado se emitió al resolver un recurso administrativo; si se violó el procedimiento la resolución debe
anularse, la autoridad quedará vinculada a subsanar la irregularidad procesal y a emitir una nueva; cuando el
motivo de la nulidad fue una deficiencia formal, por ejemplo, la ausencia de fundamentación y motivación, la
autoridad queda constreñida a dictar una nueva resolución fundada y motivada. En esa virtud, la nulidad lisa y
llana coincide con la nulidad para efectos en la aniquilación total, la desaparición en el orden jurídico de la
resolución o acto impugnado, independientemente de la causa específica que haya originado ese
pronunciamiento, pero también existen diferencias, según sea la causa de anulación, por ejemplo, en la
nulidad lisa y llana la resolución o acto quedan nulificados y no existe la obligación de emitir una nueva
resolución en los casos en que no exista autoridad competente, no existan fundamentos ni motivos que puedan
sustentarla o que existiendo se hayan extinguido las facultades de la autoridad competente; sin embargo,
habrá supuestos en los que la determinación de nulidad lisa y llana, que aunque no constriñe a la autoridad
tampoco le impedirá a la que sí es competente que emita la resolución correspondiente o subsane el vicio que
dio motivo a la nulidad, ya que en estas hipótesis no existe cosa juzgada sobre el problema de fondo del
debate, es decir, solamente la nulidad absoluta o lisa y llana que se dicta estudiando el fondo del asunto es la
que impide dictar una nueva resolución, pues ya existirá cosa juzgada sobre los problemas de fondo
debatidos.

Contradicción de tesis 15/2006-PL. Entre las sustentadas por la Primera y la Segunda Salas de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación. 15 de marzo de 2007. Unanimidad de diez votos. Ausente: José Ramón Cossío
Díaz. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretaria: Oliva Escudero Contreras.

El Tribunal Pleno, el quince de octubre en curso, aprobó, con el número XXXIV/2007, la tesis aislada que
antecede. México, Distrito Federal, a quince de octubre de dos mil siete.

Nota: Esta tesis no constituye jurisprudencia porque no resuelve el tema de la contradicción planteada.

65
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

66. ¿Cuando la autoridad imponga una multa fiscal mínima actualizada, con base en la Resolución
Miscelánea Fiscal, debe explicar pormenorizadamente el procedimiento para determinar, tanto el
factor de actualización, como la parte actualizada de la multa?

A. Si, a fin de que el gobernado esté en posibilidades de conocer dicho procedimiento y, en su caso,
pueda impugnarlo por vicios propios
B. No porque se trata de una multa fiscal mínima
C. No porque se trata de una multa fiscal mínima y la actualización de las multas es un acto
administrativo que emana de la autoridad fiscal competente, el cual, por si mismo, no modifica ni
deroga los montos establecidos en dicho Código Tributario Federal

Justificación:

Registro: 182813
Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XVIII, Noviembre de 2003,
Materia(s): Constitucional, Administrativa
Tesis: 2a./J. 95/2003
Página: 153

MULTA FISCAL MÍNIMA ACTUALIZADA. LA AUTORIDAD QUE LA IMPONE CON BASE EN


LA RESOLUCIÓN MISCELÁNEA FISCAL, DEBE MOTIVAR LA SANCIÓN, SÓLO EN CUANTO
A LA PARTE ACTUALIZADA. Si bien es cierto que conforme al criterio sostenido por esta Segunda Sala
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la tesis de jurisprudencia 2a./J. 127/99, visible en la página
219 del Tomo X del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, correspondiente a diciembre de 1999,
la circunstancia de que cuando la autoridad administrativa no exprese los motivos que la llevaron a imponer el
monto mínimo por el que pueda establecerse una sanción pecuniaria, no puede considerarse como un vicio
formal que amerite la concesión del amparo por transgresión a la garantía de seguridad jurídica prevista en el
artículo 16 de la Constitución Federal, dado que una vez acreditada la existencia de la conducta infractora el
monto de aquélla no podrá ser inferior, también lo es que cuando la autoridad imponga una multa fiscal
mínima actualizada, con base en la Resolución Miscelánea Fiscal, dicha autoridad debe explicar
pormenorizadamente el procedimiento para determinar, tanto el factor de actualización, como la parte
actualizada de la multa, a fin de que el gobernado esté en posibilidades de conocer dicho procedimiento y, en
su caso, pueda impugnarlo por vicios propios. Lo anterior es así, toda vez que la autoridad fiscal cuando
impone una multa fiscal mínima actualizada, aun cuando sigue siendo la mínima, aplica una cantidad diversa
a la prevista en el Código Fiscal de la Federación, y dado que la actualización de las multas es un acto
administrativo que emana de la autoridad fiscal competente, el cual, por si mismo, no modifica ni deroga los
montos establecidos en dicho Código Tributario Federal, sino sólo los actualiza, es de concluir que para que
la autoridad salvaguarde los principios de seguridad jurídica y reserva de ley, debe fundar su acto, tanto en las
disposiciones aplicables del Código Fiscal de la Federación, como de la Resolución Miscelánea Fiscal, así
como motivar la parte actualizada de la sanción que consiste en la diferencia entre la multa mínima prevista
en la norma aplicable y el monto mínimo actualizado a que se refiere la Resolución Miscelánea Fiscal.

Contradicción de tesis 170/2002-SS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado del Décimo
Tercer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Sexto Circuito. 17 de octubre
de 2003. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: José Vicente Aguinaco Alemán. Ponente: Genaro David
Góngora Pimentel. Secretario: Bertín Vázquez González.

Tesis de jurisprudencia 95/2003. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veinticuatro de octubre de dos mil tres.

66
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

67. Los artículos 166 y 167 de la Ley Agraria, dicen:

“Artículo 166.- Los tribunales agrarios proveerán las diligencias precautorias necesarias para proteger a los
interesados. Asimismo, podrán acordar la suspensión del acto de autoridad en materia agraria que pudiere
afectarlos, en tanto se resuelve en definitiva. La suspensión se regulará aplicando en lo conducente lo
dispuesto por el libro primero, título segundo, capítulo III, de la Ley de Amparo.--- En la aplicación de las
disposiciones de ese ordenamiento para efectos de la suspensión del acto de autoridad en materia agraria, los
tribunales agrarios considerarán las condiciones socioeconómicas de los interesados para el establecimiento
de la garantía inherente a la reparación del daño e indemnización que pudiera causarse con la suspensión, si la
sentencia no fuere favorable para el quejoso."

“Artículo 167.- El Código Federal de Procedimientos Civiles es de aplicación supletoria, cuando no exista
disposición expresa en esta ley, en lo que fuere indispensable para completar las disposiciones de este Título y
que no se opongan directa o indirectamente.”

Ahora bien, en un juicio agrario donde la controversia surge entre particulares, ¿cuál es el
ordenamiento supletorio para determinar la procedencia y términos de una medida cautelar?

A. El Código Federal de Procedimientos Civiles


B. La Ley de Amparo
C. El código de procedimientos civiles local del estado donde se tramita el juicio

Justificación:

Registro No. 167688


Novena Época.
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXIX, Marzo de 2009.
Página: 449
Tesis: 2a./J. 27/2009.
Jurisprudencia. Materia(s): Administrativa

MEDIDAS CAUTELARES. LAS PREVISTAS EN EL PRIMER PÁRRAFO, PRIMERA PARTE,


DEL ARTÍCULO 166 DE LA LEY AGRARIA, SE RIGEN POR EL CÓDIGO FEDERAL DE
PROCEDIMIENTOS CIVILES, DE APLICACIÓN SUPLETORIA. La Segunda Sala de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación, en la jurisprudencia 2a./J. 74/2005, de rubro: "AGRARIO. SI LOS
EJIDATARIOS DEMANDAN AL EJIDO Y SOLICITAN EL EMBARGO PRECAUTORIO DE BIENES,
EL TRIBUNAL UNITARIO AGRARIO PUEDE ORDENAR DICHA MEDIDA CAUTELAR Y, EN SU
CASO, FIJAR LA GARANTÍA CONFORME A LAS CONDICIONES ECONÓMICAS DE LOS
ACTORES.", sostuvo que el Tribunal Agrario debe fijar el monto de la garantía para otorgar una medida
cautelar, considerando las condiciones socioeconómicas de los solicitantes, de manera similar a lo establecido
en el segundo párrafo del artículo 166 de la Ley Agraria, para las garantías requeridas con motivo de la
suspensión de actos de autoridad. Empero, lo anterior no significa que las disposiciones que el Libro Primero,
Título Segundo, Capítulo III, de la Ley de Amparo establece para la suspensión, deban aplicarse para
determinar la procedencia y términos de las medidas cautelares solicitadas en un juicio agrario, pues éstas
proceden en caso de que lo demandado derive de actos de particulares; de ahí que al no regular la Ley Agraria
tales medidas, conforme a su artículo 167 es necesario acudir supletoriamente al Código Federal de
Procedimientos Civiles.

Contradicción de tesis 217/2008-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Segundo,
ambos en Materias Penal y Administrativa del Décimo Séptimo Circuito. 4 de marzo de 2009. Cinco votos.
Ponente: Genaro David Góngora Pimentel. Secretaria: Blanca Lobo Domínguez.

Tesis de jurisprudencia 27/2009. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
once de marzo de dos mil nueve.

Nota: La tesis 2a./J. 74/2005 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Novena Época, Tomo XXII, julio de 2005, página 450.

67
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

68. Tratándose de materia fiscal, complete el principio general de derecho que se presenta: Las leyes
que establecen excepciones a las reglas son de estricta interpretación y

A. No pueden hacerse extensivas por analogía, pero si por mayoría de razón a situaciones diversas de las
expresamente previstas
B. No pueden hacerse extensivas por analogía o por mayoría de razón a situaciones análogas de las
expresamente previstas
C. No pueden hacerse extensivas por analogía o por mayoría de razón a situaciones diversas de las
expresamente previstas

Justificación:

Registro: 2000016
Décima Época
Instancia: Segunda Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 4
Materia(s): Administrativa
Tesis: 2a./J. 2/2011 (10a.)
Página: 2887

MARCAS. SU REGISTRO EN TÉRMINOS DEL ARTÍCULO 90, FRACCIÓN XVI, DE LA LEY DE


LA PROPIEDAD INDUSTRIAL. La indicada norma legal establece que no es registrable como marca la
que sea idéntica o semejante en grado de confusión a otra en trámite de registro presentada con anterioridad o
a una registrada y vigente, aplicada a los mismos o similares productos o servicios; asimismo, prevé una
excepción a esa regla, consistente en que podrá registrarse una marca idéntica a otra ya registrada, si la
solicitud la plantea el mismo titular para aplicarla a productos o servicios similares. Esto es, para obtener el
registro de una marca idéntica a otra registrada con anterioridad se requiere que la solicitud la plantee el
mismo titular de la marca registrada y que ésta sea para aplicarla a los mismos productos o servicios. Ahora
bien, conforme al principio general de derecho relativo a que las leyes que establecen excepciones a las reglas
son de estricta interpretación y no pueden hacerse extensivas por analogía o por mayoría de razón a
situaciones diversas de las expresamente previstas, se concluye que la aludida excepción debe interpretarse de
manera estricta y aplicarse únicamente a los casos en que la solicitud la plantee el titular de la marca
registrada y no para aquellos en que la presente persona distinta, aun cuando esta última exhiba documento a
través del cual el titular de la marca registrada expresa su consentimiento para que se otorgue el registro
marcario solicitado, y ambos pertenezcan al mismo grupo económico; estimar lo contrario, implicaría que
existan dos registros respecto de una marca idéntica, obligando al Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial a expedir dos títulos a personas distintas sobre una misma marca.

Contradicción de tesis 347/2011. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Décimo y Cuarto,
ambos en Materia Administrativa del Primer Circuito. 5 de octubre de 2011. Cinco votos. Ponente: Sergio
Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: Amalia Tecona Silva.

Tesis de jurisprudencia 2/2011 (10a.). Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada
del diecinueve de octubre de dos mil once.

68
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

69. Precise las funciones del comisariado ejidal.

A. Es el órgano encargado de la ejecución de los acuerdos de la asamblea, así como de la representación


del ejido
B. Es el órgano de representación del ejido, encargado de su gestión administrativa del ejido
C. Es el órgano encargado de la ejecución de los acuerdos de la asamblea, así como de la representación
y gestión administrativa del ejido

Justificación:

Ley Agraria

Artículo 32.- El comisariado ejidal es el órgano encargado de la ejecución de los acuerdos de la asamblea, así
como de la representación y gestión administrativa del ejido. Estará constituido por un Presidente, un
Secretario y un Tesorero, propietarios y sus respectivos suplentes. Asimismo, contará en su caso con las
comisiones y los secretarios auxiliares que señale el reglamento interno. Este habrá de contener la forma y
extensión de las funciones de cada miembro del comisariado; si nada dispone, se entenderá que sus
integrantes funcionarán conjuntamente.

69
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

70. Conforme a la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la expropiación es un


acto privativo que la autoridad puede emitir:

A. Sin respetar la garantía de audiencia del afectado, por tratarse de una excepción a lo dispuesto en el
artículo 14 constitucional
B. Sólo si previamente observa la garantía de audiencia del afectado
C. Sin respetar previamente la garantía de audiencia, aunque sí debe ser oído el afectado con
posterioridad a su emisión

Justificación:

No. Registro: 174253


Jurisprudencia. Materia(s): Administrativa
Novena Época. Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXIV, Septiembre de 2006. Tesis: 2a./J. 124/2006. Página: 278

EXPROPIACIÓN. LA GARANTÍA DE AUDIENCIA DEBE RESPETARSE EN FORMA PREVIA A


LA EMISIÓN DEL DECRETO RELATIVO. Conforme al artículo 197 de la Ley de Amparo, la Segunda
Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación modifica la jurisprudencia 834, publicada en el Apéndice al
Semanario Judicial de la Federación 1917-1988, Segunda Parte, página 1389, con el rubro:
"EXPROPIACIÓN, LA GARANTÍA DE PREVIA AUDIENCIA NO RIGE EN MATERIA DE.", porque de
una nueva reflexión se concluye que de la interpretación del artículo 14, párrafo segundo, de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, los actos privativos de la propiedad deben realizarse, por regla
general, mediante un procedimiento dirigido a escuchar previamente al afectado, en el que se cumplan las
formalidades esenciales del procedimiento, que son las señaladas en la jurisprudencia P./J. 47/95, de rubro:
"FORMALIDADES ESENCIALES DEL PROCEDIMIENTO. SON LAS QUE GARANTIZAN UNA
ADECUADA Y OPORTUNA DEFENSA PREVIA AL ACTO PRIVATIVO.", las que resultan necesarias
para garantizar la defensa adecuada antes del acto de privación y que, de manera genérica, se traducen en los
siguientes requisitos: 1) La notificación del inicio del procedimiento y sus consecuencias; 2) La oportunidad
de ofrecer y desahogar las pruebas en que se finque la defensa; 3) La oportunidad de alegar; y 4) El dictado de
una resolución que dirima las cuestiones debatidas. En ese sentido, tratándose de actos privativos como lo es
la expropiación, para que la defensa sea adecuada y efectiva debe ser previa, en orden a garantizar
eficazmente los bienes constitucionalmente protegidos a través del mencionado artículo 14, sin que lo anterior
se contraponga al artículo 27 de la Constitución Federal, pues si bien es cierto que este precepto establece las
garantías sociales, las cuales atienden a un contenido y finalidades en estricto sentido al régimen de propiedad
agraria, y por extensión a las modalidades de la propiedad, al dominio y a la propiedad nacional, también lo es
que la expropiación no es una garantía social en el sentido estricto y constitucional del concepto, sino que es
una potestad administrativa que crea, modifica y/o extingue relaciones jurídicas concretas, y que obedece a
causas establecidas legalmente y a valoraciones discrecionales de las autoridades administrativas; además, la
expropiación es una potestad administrativa dirigida a la supresión de los derechos de uso, disfrute y
disposición de un bien particular decretada por el Estado, con el fin de adquirirlo.

Varios 2/2006-SS, solicitud de modificación de jurisprudencia. Ministro Mariano Azuela Güitrón, Presidente
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. 18 de agosto de 2006. Mayoría de cuatro votos. Disidente: Juan
Díaz Romero. Ponente: Genaro David Góngora Pimentel. Secretario: David Rodríguez Matha.

Tesis de jurisprudencia 124/2006. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veinticinco de agosto de dos mil seis

Nota: La tesis P./J. 47/95 citada, aparece publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
Novena Época, Tomo II, diciembre de 1995, página 133.

70
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

71. Tratándose de multas, la interposición del recurso de revisión conforme lo dispuesto en la Ley
Federal de Procedimiento Administrativo, suspende la ejecución del acto impugnado, siempre y
cuando:

A. El recurrente garantice el crédito fiscal en cualesquiera de las formas previstas en el Código Fiscal de
la Federación
B. El monto de la multa no exceda de 25 salarios mínimos
C. El crédito fiscal con motivo del cual se impuso la multa no exceda de 2,500 veces el salario mínimo

Justificación:

Ley Federal de Procedimiento Administrativo

Artículo 87.- La interposición del recurso suspenderá la ejecución del acto impugnado, siempre y cuando:

I. Lo solicite expresamente el recurrente;

II. Sea procedente el recurso;

III. No se siga perjuicio al interés social o se contravengan disposiciones de orden público;

IV. No se ocasionen daños o perjuicios a terceros, a menos que se garanticen éstos para el caso de no obtener
resolución favorable; y

V. Tratándose de multas, el recurrente garantice el crédito fiscal en cualesquiera de las formas prevista en el
Código Fiscal de la Federación.

La autoridad deberá acordar, en su caso, la suspensión o la denegación de la suspensión dentro de los cinco
días siguientes a su interposición, en cuyo defecto se entenderá otorgada la suspensión.

71
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

72. La Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo, en su artículo 8, fracción VIII, establece que
será improcedente el juicio ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa contra actos “impugnados
en un procedimiento judicial”.

Se promueve un juicio contencioso federal, en contra de una resolución administrativa. La autoridad demandada
acredita que, antes de presentar la demanda, el actor promovió un juicio de amparo indirecto, el cual se
encuentra en trámite, en el que reclamó el mismo acto, cuya nulidad solicita.

De conformidad con la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ¿se actualiza la causa de
improcedencia prevista en la citada fracción VIII?

A. No, porque la citada fracción se refiere exclusivamente a juicios ordinarios, como lo es el contencioso
administrativo, y no al juicio de amparo, que es un medio de defensa extraordinario.
B. No, porque la citada fracción se refiere solamente a actos impugnados en otros juicios que, al momento de
presentarse la demanda de nulidad, hayan estado resueltos, es decir, prevé la institución de la cosa juzgada, no
la de litispendencia.
C. Sí, porque ambos juicios, de resultar favorables al promovente, tienen como consecuencia que se deje sin
efectos el acto impugnado, por lo que deben considerarse excluyentes entre sí.

Justificación: Registro No. 165774. Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta. XXX, Diciembre de 2009. Página: 304. Tesis: 2a./J. 208/2009. Jurisprudencia. Materia(s):
Administrativa

JUICIO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO. ES IMPROCEDENTE CUANDO EL ACTOR, ANTES DE


PRESENTAR LA DEMANDA RELATIVA, PROMOVIÓ JUICIO DE AMPARO INDIRECTO
RECLAMANDO LOS MISMOS ACTOS CUYA NULIDAD DEMANDÓ. Tanto el artículo 202, fracción VIII, del
Código Fiscal de la Federación (vigente hasta el 31 de diciembre de 2005), como la fracción VIII del artículo 8o. de la
Ley Federal de Procedimiento Contencioso Administrativo, establecen que será improcedente el juicio ante el Tribunal
Federal de Justicia Fiscal y Administrativa contra actos impugnados en un procedimiento judicial, lo cual incluye al
juicio de amparo indirecto, pues aun cuando en él se planteen cuestiones de constitucionalidad, no implica que deba
excluirse por no considerarse una acción ordinaria, sino un medio de defensa extraordinario. Lo anterior, porque al
igual que en los procedimientos administrativos seguidos en los tribunales contenciosos, de resultar favorable la
sentencia a los intereses del promovente, la consecuencia será que se deje sin efectos el acto impugnado, por lo que
aun cuando las cuestiones estudiadas en las acciones de nulidad y de amparo difieran en cuanto a su naturaleza,
deben considerarse excluyentes entre sí.

Contradicción de tesis 352/2009. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del
Tercer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Sexto Circuito. 11 de noviembre de 2009.
Unanimidad de cuatro votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: Armida Buenrostro Martínez.-
Tesis de jurisprudencia 208/2009. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del dieciocho
de noviembre de dos mil nueve.

La ejecutoria de la que derivó dicha jurisprudencia, dice, en lo que interesa: “(…) En la especie, la causal en
estudio [fracción VIII], relativa a que es improcedente el juicio de nulidad contra actos que hayan sido
impugnados en un procedimiento judicial, tiene como finalidad garantizar que no haya duplicidad de acciones,
una ante autoridad judicial, y otra, ante la instancia administrativa, que cuando se encuentra una pendiente de resolver, se
conoce como "litispendencia" y cuando ya ha sido resuelta se le denomina "cosa juzgada".

Aquí, se está en presencia de la primera figura, es decir, de LITISPENDENCIA, lo cual presupone que al momento
de presentarse la demanda ante el Tribunal Fiscal de la Federación, no debe existir alguna otra acción en trámite, pues de
tal forma se asegura la certeza jurídica en la resolución, ya que una vez elegida una vía, ésta habrá de agotarse, por tanto,
la procedencia de la acción contenciosa, para el caso de improcedencia que se analiza, queda supeditada a que no se haya
hecho valer ninguna otra ante autoridad judicial.

No pasa inadvertido para esta Sala que la figura de litispendencia, conforme al criterio sustentado por la Sala Auxiliar de
esta Suprema Corte de Justicia de la Nación, Novena Época, localizable en el Semanario Judicial de la Federación, tomo
75, Séptima Parte, página 21, establece que el término "litispendencia", significa que exista algún otro juicio pendiente
de resolver, y procede como excepción cuando existen dos juicios en trámite en los que existe identidad completa, es
decir, que se trate de las mismas personas, que sean iguales las acciones deducidas, que procedan de las mismas causas, y
que sea igual, también, la calidad con que intervienen las partes.

La tesis aislada de referencia es del siguiente tenor: "LITISPENDENCIA, EXCEPCIÓN DE. CONCEPTO Y
PROCEDENCIA. El término ‘litispendencia’, significa que existe algún otro juicio pendiente de resolver, y procede
como excepción cuando un Juez conoce ya del mismo negocio. La palabra ‘mismo’ exige que en los dos juicios haya
identidad completa, es decir, que se trate de las mismas personas, que sean iguales las acciones deducidas, que procedan
de las mismas causas, y que sea igual, también, la calidad con que intervienen las partes."

Sin embargo, el Pleno de esta Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó, al resolver el amparo directo en
revisión 2969/97, promovido por **********, en sesión de dieciocho de mayo del año dos mil, por unanimidad de once
votos, que la hipótesis normativa prevista en la causal de improcedencia en estudio actualiza la figura de
litispendencia, por lo que en ese aspecto esta Sala reitera lo considerado por el Pleno de este Alto Tribunal. (…)”

72
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

73. El artículo 17 constitucional garantiza a favor de los gobernados el derecho de acceso efectivo a la
justicia, que se concreta en la posibilidad de ser parte dentro de un proceso y promover la actividad
jurisdiccional que, una vez cumplidos los respectivos requisitos procesales, permita obtener una
decisión jurisdiccional sobre las pretensiones deducidas. En sede administrativa, dicha prerrogativa se
salvaguarda cuando en la previsión legislativa se establecen mecanismos que, además de atender a la
naturaleza de la vía que se intenta y a la finalidad de los medios de defensa, resultan eficaces y facilitan
a los gobernados acceder a ellos. En ese tenor, el legislador debe considerar que los medios de
impugnación puedan presentarse

A. Directamente en las oficinas de la autoridad emisora del acto y en las oficinas de correos para que lo
remitan a la autoridad administrativa competente
B. En las oficinas de correos para que lo remitan a la autoridad administrativa competente o enviarse
mediante mensajería o telefax
C. Directamente en las oficinas de la autoridad emisora del acto, en las oficinas de correos para que lo
remitan a la autoridad administrativa competente, o enviarse mediante mensajería o telefax

Justificación:

Registro: 2000264
Décima Época
Instancia: Segunda Sala
Jurisprudencia
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
Libro V, Febrero de 2012, Tomo 2
Materia(s): Constitucional
Tesis: 2a./J. 41/2011 (10a.)
Página: 1337

PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO. EL ARTÍCULO 42 DE LA LEY FEDERAL RELATIVA,


AL PREVER QUE EL ESCRITO INICIAL DE IMPUGNACIÓN DEBE PRESENTARSE
DIRECTAMENTE EN LAS OFICINAS DE LA AUTORIDAD EMISORA DEL ACTO, VULNERA
LA GARANTÍA DE ACCESO A LA JUSTICIA. El segundo párrafo del artículo 17 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos garantiza a favor de los gobernados el derecho de acceso efectivo a
la justicia, que se concreta en la posibilidad de ser parte dentro de un proceso y promover la actividad
jurisdiccional que, una vez cumplidos los respectivos requisitos procesales, permita obtener una decisión
jurisdiccional sobre las pretensiones deducidas. En sede administrativa, dicha prerrogativa se salvaguarda
cuando en la previsión legislativa se establecen mecanismos que, además de atender a la naturaleza de la vía
que se intenta y a la finalidad de los medios de defensa, resultan eficaces y facilitan a los gobernados acceder
a ellos. En ese tenor, el artículo 42 de la Ley citada transgrede el acceso a esa prerrogativa, al prever como
mandato ineludible que el escrito inicial de impugnación se presente directamente en las oficinas de la
autoridad emisora del acto, sin considerar que con ello se impide que el promovente opte por presentarlo en
las oficinas de correos para que lo remitan a la autoridad administrativa competente, lo que entorpece y
restringe el acceso al medio de defensa, desatendiendo el artículo 17 constitucional. En todo caso, el indicado
escrito puede presentarse en las oficinas autorizadas al efecto, en las de correos o enviarse mediante
mensajería o telefax.

Contradicción de tesis 286/2011. Entre las sustentadas por el Segundo y el Tercer Tribunales Colegiados,
ambos en Materia Administrativa del Sexto Circuito, el Primer Tribunal Colegiado de Circuito del Centro
Auxiliar de la Cuarta Región, con residencia en Xalapa, Veracruz, el entonces Tercer Tribunal Colegiado del
Quinto Circuito, actual Segundo Tribunal Colegiado en Materias Civil y de Trabajo del Quinto Circuito, el
Noveno Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito y el entonces Primer Tribunal
Colegiado Auxiliar con residencia en Guadalajara, Jalisco, actual Tercer Tribunal Colegiado de Circuito del
Centro Auxiliar de la Tercera Región, con residencia en Guadalajara, Jalisco. 19 de octubre de 2011. Cinco
votos. Ponente: José Fernando Franco González Salas. Secretaria: Maura Angélica Sanabria Martínez.

Tesis de jurisprudencia 41/2011 (10a.). Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión
privada del veintitrés de noviembre de dos mil once.

73
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

74. El recurso de revisión conforme lo dispuesto en la Ley Federal de Procedimiento Administrativo, se


tendrá por no interpuesto y se desechará cuando:

A. Se presente fuera del plazo; no se haya acompañado la documentación que acredite la personalidad
del recurrente; no aparezca suscrito por quien deba hacerlo, a menos que se firme antes del
vencimiento del plazo para interponerlo
B. Se presente fuera del plazo; no se haya acompañado la documentación que acredite la personalidad
del representante legal del recurrente; no aparezca suscrito por quien deba hacerlo, a menos que se
firme antes del vencimiento del plazo para interponerlo
C. Se presente fuera del plazo; no se haya acompañado la documentación que acredite la personalidad
del recurrente; no aparezca suscrito por quien deba hacerlo

Justificación:

Ley Federal de Procedimiento Administrativo

Artículo 88.- El recurso se tendrá por no interpuesto y se desechará cuando:

I. Se presente fuera de plazo;

II. No se haya acompañado la documentación que acredite la personalidad del recurrente; y

III. No aparezca suscrito por quien deba hacerlo, a menos que se firme antes del vencimiento del plazo para
interponerlo.

74
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

75. Determine si en la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos se


encuentra prevista la prescripción de la facultad de las autoridades para imponer sanciones a los
servidores públicos y, en su caso, cómo debe computarse el plazo respectivo.

A. Sí se encuentra prevista, y el plazo debe computarse, en todos los casos, a partir de que el órgano
interno de control tiene conocimiento de la conducta infractora del servidor público a quien se
pretende sancionar
B. Sí se encuentra prevista, y el plazo debe computarse, dependiendo de la naturaleza jurídica de la
conducta que se pretende sancionar; esto es, a partir del día siguiente en que se haya incurrido en la
responsabilidad, si se trata de conductas que se consuman en un solo acto, o bien, si la conducta es de
carácter continuo, a partir de que ésta hubiere cesado
C. El legislador no previó la prescripción, en atención a que las responsabilidades administrativas de los
servidores públicos son cuestiones de orden público e interés social

Justificación:

No. Registro: 165711


Novena Época
Instancia: Segunda Sala
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, XXX, Diciembre de 2009
Página: 308
Tesis: 2a./J. 200/2009
Jurisprudencia
Materia(s): Administrativa

PRESCRIPCIÓN DE LA FACULTAD PARA IMPONER SANCIONES A LOS SERVIDORES


PÚBLICOS. EL PLAZO PARA QUE OPERE INICIA A PARTIR DEL DÍA SIGUIENTE AL EN
QUE SE HUBIERA INCURRIDO EN LA RESPONSABILIDAD O A PARTIR DEL MOMENTO EN
QUE ÉSTA HUBIERE CESADO, SI FUESE DE CARÁCTER CONTINUO (LEGISLACIONES
FEDERAL Y DE LOS ESTADOS DE CHIAPAS Y DE GUERRERO). Los artículos 75 de la Ley de
Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado de Chiapas; 75 de la Ley Número 674 de
Responsabilidades de los Servidores Públicos del Estado de Guerrero; 78 de la Ley Federal de
Responsabilidades de los Servidores Públicos y 34 de la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas
de los Servidores Públicos, disponen que el plazo para que opere la prescripción para imponer sanciones a los
servidores públicos inicia a partir del día siguiente al en que se hubiera incurrido en la responsabilidad o a
partir del momento en que ésta hubiere cesado, si fuese de carácter continuo, por lo que para computar el
plazo de la prescripción es irrelevante la fecha en que las autoridades tuvieron conocimiento de la conducta
infractora del servidor público a quien se pretende sancionar.

Contradicción de tesis 382/2009. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Segundo en Materias
Penal y Administrativa del Vigésimo Primer Circuito, Primero del Vigésimo Circuito y Tercero en Materia
Administrativa del Sexto Circuito. 4 de noviembre de 2009. Cinco votos. Ponente: Margarita Beatriz Luna
Ramos. Secretaria: Paula María García Villegas.

Tesis de jurisprudencia 200/2009. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
once de noviembre de dos mil nueve.

75
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

76. La inasistencia del demandado a la segunda etapa de la audiencia de ley (demanda y contestación)
celebrada en el procedimiento laboral, determina:

A. Que se tenga por contestada la demanda en sentido afirmativo y por perdido el derecho del enjuiciado
a ofrecer pruebas.
B. Que se tenga por contestada la demanda en sentido afirmativo y, en consecuencia, que se dicte laudo
condenatorio.
C. Que se tenga por contestada la demanda en sentido afirmativo, sin perjuicio de que en la siguiente
etapa pueda ofrecer pruebas para justificar que el actor no era su trabajador, que no existió el despido
o que no son ciertos los hechos afirmados en la demanda.

Justificación:

Artículo 879, tercer párrafo de la Ley Federal del Trabajo:

Si el demandado no concurre, la demanda se tendrá por contestada en sentido afirmativo, sin perjuicio de que
en la etapa de ofrecimiento y admisión de pruebas, demuestre que el actor no era trabajador o patrón, que no
existió el despido o que no son ciertos los hechos afirmados en la demanda.

76
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

77. Cuando un trabajador solicita al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores
la información y devolución de las aportaciones realizadas en su favor y dicho instituto omite
contestarle, ¿podría considerarse ese acto omisivo como proveniente de autoridad para efectos del
juicio de amparo?

A. No puede tener el carácter de acto de autoridad porque, al tratarse de una prestación laboral, el
mencionado instituto se equipara a un particular, al igual que el patrón.
B. Sí es un acto de autoridad, ya que impide al trabajador disponer de sus aportaciones o conocer su
destino, limitando de esa manera su propiedad.
C. No, porque quien debe proporcionar dicha información es la Administradora del Fondos para el
Retiro (Afore) que haya elegido el trabajador.

Justificación:

Registro No. 161059. Localización: Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Tomo XXXIV, Septiembre de 2011, Página: 1338. Tesis: 2a./J. 149/2011.
Jurisprudencia. Materia(s): Común

INSTITUTO DEL FONDO NACIONAL DE LA VIVIENDA PARA LOS TRABAJADORES. ES


AUTORIDAD PARA EFECTOS DEL JUICIO DE AMPARO CUANDO SE LE RECLAMA LA
OMISIÓN DE DAR RESPUESTA A LA PETICIÓN DE INFORMACIÓN Y DEVOLUCIÓN DE LOS
FONDOS ACUMULADOS EN LA SUBCUENTA DE VIVIENDA, POSTERIORES AL TERCER
BIMESTRE DE 1997. El referido Instituto, como organismo descentralizado, tiene la atribución de
administrar el Fondo Nacional de la Vivienda, integrado con las aportaciones realizadas por los patrones en
favor de sus trabajadores, y que forman parte del patrimonio de éstos, quienes para poder disponer de esos
recursos deben sujetarse a las modalidades establecidas en las leyes. Por otra parte, conforme al artículo
octavo transitorio del Decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley del
Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, publicado en el Diario Oficial de la
Federación el 6 de enero de 1997, dicho Instituto está obligado a transferir al Gobierno Federal los recursos de
las subcuentas de vivienda posteriores al tercer bimestre de 1997, con independencia de que esa norma
transitoria haya sido declarada inconstitucional, en tanto que el actual modelo de control de constitucionalidad
de leyes no prevé como consecuencia expulsarla del sistema jurídico. Por tanto, cuando el INFONAVIT omite
contestar la solicitud de información y devolución relativa a los recursos referidos, impide a los trabajadores o
a sus beneficiarios disponer de ellos o conocer su destino, lo que evidentemente afecta su esfera jurídica, por
el hecho de limitar su propiedad, actúa como autoridad para efectos del juicio de amparo, debido a que
unilateralmente, con fundamento en el mencionado artículo transitorio, transfiere los fondos citados, lo que
hace que con su omisión tenga injerencia inmediata y directa en la esfera jurídica del trabajador o de sus
beneficiarios solicitantes, puesto que presupone el ejercicio de una facultad inexcusable prevista en ley,
situándolo en una relación de supra a subordinación con el particular, sin que para ello requiera acudir a los
órganos jurisdiccionales.

Contradicción de tesis 253/2011. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal Colegiado de Circuito del
Centro Auxiliar de la Tercera Región, con residencia en Guadalajara, Jalisco (antes Primer Tribunal
Colegiado Auxiliar de la misma región) y el Primer Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Tercer
Circuito. 17 de agosto de 2011. Cinco votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: Amalia
Tecona Silva.

Tesis de jurisprudencia 149/2011. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veinticuatro de agosto de dos mil once.

77
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

78. Dentro de un juicio laboral el trabajador ofrece la prueba pericial, sin embargo, omite designar
perito de su parte.

En este supuesto ¿Qué debe proveer la junta?

A. Debe declarar desierta la prueba.


B. Debe designar el perito que corresponda al trabajador.
C. Debe desecharse la prueba.

Justificación:

Artículo 824, fracción I de la Ley Federal del Trabajo:

La Junta nombrará los peritos que correspondan al trabajador, en cualquiera de los siguientes casos:

I. Si no hiciera nombramiento de perito;

78
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

79. En un juicio laboral burocrático la parte actora demanda del Secretario de Hacienda y Crédito
Público el cumplimiento de diversas prestaciones de trabajo. El licenciado Víctor Chávez contesta la
demanda y solicita se le reconozca la personalidad como apoderado de la dependencia demandada, en
términos del oficio que expidió a su favor el Secretario de Hacienda y Crédito Público. La parte actora
plantea incidente de falta personalidad de quien se ostentó como apoderado de la parte demandada,
aduciendo que a la contestación de demanda, además del oficio correspondiente, debió agregarse copia
certificada del nombramiento del Secretario de Hacienda y Crédito Público. El incidente se declara
infundado.

De acuerdo a la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ¿considera correcta tal


determinación?

A. No, pues para tener por demostrada la personalidad del apoderado del secretario demandado, es
necesario que conjuntamente con el oficio en el que se otorga el poder se exhiba copia certificada del
nombramiento de quien lo expide. Lo anterior, con el fin de tener la certeza de que quien otorgó el
poder se encuentra facultado para ello.
B. Sí, porque el oficio expedido por el secretario demandado es un documento público, al haberse
expedido por una autoridad en ejercicio de sus funciones; en consecuencia, hace prueba plena en el
juicio, salvo prueba en contrario.
C. Ninguna de las anteriores.

Justificación:

No. Registro: 188779. Jurisprudencia. Materia(s): Laboral Novena Época. Instancia: Segunda Sala Fuente:
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta XIV, Septiembre de 2001. Tesis: 2a./J. 38/2001. Página: 492

PERSONALIDAD EN LOS JUICIOS LABORALES BUROCRÁTICOS. LA DEL APODERADO


DESIGNADO POR EL TITULAR DE UNA DEPENDENCIA O ENTE OFICIAL SE ACREDITA
MEDIANTE OFICIO, SIN NECESIDAD DE COMPROBAR EL NOMBRAMIENTO DEL TITULAR QUE
LO SUSCRIBE. El oficio que contiene la designación de apoderados por parte del titular de un ente o
dependencia oficial para que lo represente en el juicio laboral burocrático en el que es parte, constituye un
documento público que, salvo prueba en contrario, hace fe en el juicio en el que se presenta, sin necesidad de
legalización, lo cual significa que no se requiere de la comprobación del nombramiento del titular que lo
expide, en tanto que al emanar de una autoridad que actúa en el ámbito de su competencia, es decir, en
ejercicio de sus funciones, como titular que lo expide (o como autoridad facultada para realizar la
certificación respectiva), el acto en él contenido se encuentra investido del principio de presunción de
legalidad y, por ello, hace prueba plena lo afirmado en él por la autoridad que lo suscribe, siempre que no sea
desvirtuado por otros elementos de convicción. Lo anterior da sentido a la disposición del legislador ordinario
de exigir del titular la sola emisión del referido oficio, cuando en uso de la facultad que le confiere la ley
designa apoderados que lo representen en los juicios laborales burocráticos en los que es parte.

Contradicción de tesis 100/2000-SS. Entre las sustentadas por el Séptimo y Tercer Tribunales Colegiados,
ambos en Materia de Trabajo del Primer Circuito. 6 de julio de 2001. Cinco votos. Ponente: Guillermo I.
Ortiz Mayagoitia. Secretaria: Aída García Franco.

Tesis de jurisprudencia 38/2001. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintidós de agosto de dos mil uno.

79
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

80. ¿En qué casos puede hacer valer el patrón la “insumisión al arbitraje” y en consecuencia ser
eximido de reinstalar al trabajador mediante el pago de una indemnización?

A. Cuando se trate de trabajadores de confianza, trabajadores eventuales y del servicio doméstico o que
por las características de sus funciones se encuentra en contacto directo con el patrón.
B. Cuando se trate de trabajadores que tengan más de tres faltas en treinta días y que desobedezcan al
patrón sin causa justificada.
C. Cuando se trate de trabajadores que durante sus labores incurran en faltas de probidad u honradez, en
actos de violencia u ocasionaran perjuicios graves a la empresa.

Justificación:

Artículo 49.- El patrón quedará eximido de la obligación de reinstalar al trabajador, mediante el pago de las
indemnizaciones que se determinan en el artículo 50 en los casos siguientes:

I. Cuando se trate de trabajadores que tengan una antigüedad menor de un año;

II. Si comprueba ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, que el trabajador, por razón del trabajo que
desempeña o por las características de sus labores, está en contacto directo y permanente con él y la Junta
estima, tomando en consideración las circunstancias del caso, que no es posible el desarrollo normal de la
relación de trabajo;

III. En los casos de trabajadores de confianza;

IV. En el servicio doméstico; y

V. Cuando se trate de trabajadores eventuales.

80
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

81. Para dar trámite a la solicitud de emplazamiento a huelga de un sindicato que solicita la firma un
contrato colectivo de trabajo, ¿es requisito necesario que el sindicato solicitante demuestre que los
trabajadores de dichas empresas son sus afiliados?

A. Si, pues con ello demuestra que se encuentra legitimado para pedir la firma del contrato colectivo de
trabajo.
B. No.
C. Únicamente cuando el estatuto del sindicato así lo determine.

Justificación:

No. Registro: 184642. Jurisprudencia. Materia(s): Laboral. Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente:
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. XVII, Marzo de 2003. Tesis: 2a./J. 15/2003. Página: 244

HUELGA. CUANDO SE SOLICITA LA FIRMA DE UN CONTRATO COLECTIVO DE TRABAJO, LA


AUTORIDAD CORRESPONDIENTE NO DEBE CONDICIONAR EL EMPLAZAMIENTO A QUE EL
SINDICATO ACREDITE QUE LOS TRABAJADORES DE LA PATRONAL SON SUS AFILIADOS,
SINO ATENERSE A LO ESTABLECIDO EN LOS ARTÍCULOS 920 Y 923 DE LA LEY FEDERAL DEL
TRABAJO. El artículo 920 de la Ley Federal del Trabajo establece que el procedimiento de huelga se inicia
con la presentación del pliego de peticiones, señalando los requisitos que debe reunir y precisando la
actuación que corresponde a la autoridad que debe hacer el emplazamiento. Por su parte, el artículo 923 de la
propia Ley dispone que la autoridad de trabajo no dará trámite al escrito de emplazamiento de huelga cuando
éste no sea formulado conforme a los requisitos señalados en el indicado artículo 920, ni cuando sea
presentado por un sindicato que no sea titular del contrato colectivo de trabajo o administrador del contrato
ley, ni tampoco cuando se pretenda exigir la firma de un contrato colectivo si ya existe uno depositado en la
Junta de Conciliación y Arbitraje competente, eventos que deberá verificar la autoridad antes de realizar el
emplazamiento. Salvo los requisitos y prevenciones mencionados, la citada Ley no exige más requisitos para
que proceda el emplazamiento, por lo que las autoridades correspondientes no están facultadas para requerir a
un sindicato, cuando solicita la firma de un contrato colectivo de trabajo mediante emplazamiento a huelga,
que acredite que los trabajadores que pretenden emplazar a huelga están afiliados a dicho sindicato, que
proporcione los nombres de los trabajadores que están en servicio y que lo justifique con documentos
idóneos, pues ello va más allá de lo que la Ley establece; en todo caso, estas condiciones no corresponde
imponerlas a la autoridad que aquí no interviene como órgano jurisdiccional, sino que son defensas que toca
oponer al patrón cuando contesta el pliego de peticiones o la solicitud que realice sobre la declaración de
inexistencia de huelga, de conformidad con los artículos 922, 926, 927, 929, 930, 931 y 932 de la Ley citada.

Contradicción de tesis 121/2002-SS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia de
Trabajo del Tercer Circuito y el Primer Tribunal Colegiado del Décimo Circuito. 7 de febrero de 2003.
Mayoría de tres votos. Ausente: Guillermo I. Ortiz Mayagoitia. Disidente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano.
Ponente: Genaro David Góngora Pimentel. Secretaria: María Marcela Ramírez Cerrillo.

Tesis de jurisprudencia 15/2003. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintiuno de febrero de dos mil tres.

81
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

82. ¿Cuál es la consecuencia de que el trabajador actor no comparezca a la audiencia de conciliación,


demanda y excepciones y ofrecimiento y admisión de pruebas?

A. Produce el diferimiento de la audiencia.


B. Produce la suspensión de la audiencia.
C. La audiencia debe celebrarse, teniendo al trabajador por inconforme con la conciliación, y por
reproducida en vía de demanda su escrito inicial.

Justificación:

Ley Federal del Trabajo: Artículo 876. La etapa conciliatoria se desarrollará en la siguiente forma:

I. Las partes comparecerán personalmente a la Junta, sin abogados patronos, asesores o apoderados. (…)

VI. De no haber concurrido las partes a la conciliación, se les tendrá por inconformes con todo arreglo y
deberán presentarse personalmente a la etapa de demanda y excepciones.

Artículo 879. La audiencia se llevará a cabo, aun cuando no concurran las partes.- Si el actor no comparece al
período de demanda y excepciones, se tendrá por reproducida en vía de demanda su comparecencia o escrito
inicial.- Si el demandado no concurre, la demanda se tendrá por contestada en sentido afirmativo, sin perjuicio
de que en la etapa de ofrecimiento y admisión de pruebas, demuestre que el actor no era trabajador o patrón,
que no existió el despido o que no son ciertos los hechos afirmados en la demanda.

Registro: 191662. Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta. XI, Junio de 2000. Materia(s): Laboral. Tesis: 2a./J. 51/2000. Página: 59

AUDIENCIA DE CONCILIACIÓN, DEMANDA Y EXCEPCIONES Y OFRECIMIENTO Y


ADMISIÓN DE PRUEBAS. NO PROCEDE DIFERIRLA POR INASISTENCIA DE UNA DE LAS
PARTES AUN CUANDO SEA POR ENFERMEDAD (INAPLICABILIDAD DEL ARTÍCULO 785 DE
LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO). Es cierto que el artículo 785 de la Ley Federal del Trabajo establece
que si una persona no puede, por enfermedad, concurrir a la Junta a absolver posiciones o contestar un
interrogatorio, previa comprobación del hecho, ésta señalará nueva fecha para el desahogo de la prueba, pero
esto obedece a que la naturaleza de dichos medios de convicción exige para su desahogo la comparecencia
personal del absolvente o testigo. Esta razón no existe cuando alguna de las partes, aunque sea por
enfermedad, no puede asistir a la audiencia de conciliación, demanda y excepciones y ofrecimiento y
admisión de pruebas, toda vez que en términos de lo previsto por los artículos 879, primer párrafo y 876,
fracciones I y VI, del mismo ordenamiento, dicha audiencia se celebrará aun cuando no concurran las
partes en virtud de que a ella puede comparecer por conducto de representante; además, con dicha
comparecencia se inicia, propiamente, el juicio laboral, por lo que a partir de esa etapa cobra
aplicación el artículo 692 de la misma ley, que dispone que las partes pueden comparecer a juicio en
forma directa o por conducto de apoderado. Lo anterior pone de manifiesto que la circunstancia
fundamental (indispensable asistencia personal) en que se finca la ley para establecer el diferimiento de la
audiencia cuando el absolvente o testigo, por enfermedad, no pueden concurrir al desahogo de la prueba, no
guarda similitud con la hipótesis de que las partes estén imposibilitadas para asistir a la mencionada
audiencia, por lo que al no tratarse de casos semejantes en términos del artículo 17 de la Ley Federal del
Trabajo, debe concluirse que en esta última hipótesis resulta inaplicable el artículo 785 del mismo
ordenamiento para decretar el diferimiento de la audiencia.

Contradicción de tesis 48/99. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado del Décimo Cuarto
Circuito y el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito. 12 de mayo del año 2000.
Cinco votos. Ponente: José Vicente Aguinaco Alemán. Secretario: Antonio Rebollo Torres.

Tesis de jurisprudencia 51/2000. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
dos de junio del año dos mil.

82
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

83. En la diligencia de emplazamiento el Actuario de la Junta se cerciora de que en el lugar señalado


para hacer la notificación, en el que se constituye, tiene su domicilio el demandado, de lo cual asienta
razón en el acta correspondiente; al no estar presente el interesado ni su representante, el mencionado
actuario procede a dejar citatorio para que el interesado o su representante le espere al día siguiente a
la misma hora para notificarle, fijando el citatorio en la puerta del domicilio en virtud de que éste se
encontraba cerrado.

En este supuesto, ¿se puede concluir que el emplazamiento se realizó conforme a lo que dispone la Ley
Federal del Trabajo?

A. Sí, porque cumple con todos los requisitos que se exigen para el emplazamiento.
B. Sí, porque el Actuario se cercioró de que ahí tenía su domicilio el demandado, asentó razón de ello y
dejó citatorio para el día siguiente por no haber estado presente interesado y por estar cerrado el lugar
en que se constituyó.
C. No, porque el citatorio lo dejó fijado en la puerta.

Justificación:

Registro No. 207817 Localización: Octava Época Instancia: Cuarta Sala Fuente: Gaceta del Semanario
Judicial de la Federación 58, Octubre de 1992 Página: 20 Tesis: 4a./J. 19/92 Jurisprudencia Materia(s):
laboral

EMPLAZAMIENTO A JUICIO EN MATERIA LABORAL. EL CITATORIO RESPECTIVO NO DEBE


FIJARSE EN LA PUERTA DE ENTRADA, SINO DEJARSE A ALGUNA PERSONA DEL DOMICILIO.
Las reglas establecidas en el artículo 743 de la Ley Federal del Trabajo tienden a garantizar, dentro del juicio
laboral, que la primera notificación --particularmente el emplazamiento--, se haga a la persona directamente
interesada o a su representante legal, para que conociendo del asunto, tenga oportunidad de ser oído en
defensa. Por ello exige que el Actuario no sólo se cerciore de que la persona habita, trabaja o tiene su
domicilio en la localidad señalada para hacer la notificación, sino que asiente los elementos que lo llevaron a
tal convicción, después de lo cual hará la notificación al interesado o a su representante si están presentes,
pero si no está ninguno de los dos "...le dejará citatorio para que lo espere al día siguiente, a una hora
determinada", como especifica la fracción III de dicho precepto. La interpretación de esta fracción, tanto
literal como sistemática, hace concluir que el citatorio debe dejarse a alguna persona del domicilio, como se
infiere de la secuencia de las tres primeras fracciones, debiendo señalarse que ninguna de ellas autoriza al
funcionario a fijar el citatorio en la puerta del local si está cerrado; tal proceder lo establece la fracción IV
tratándose de la copia de la resolución, y si bien es cierto que en este caso se corre el riesgo de que la
notificación no llegue materialmente a su destinatario, la medida se justifica, precisamente, en razón del
desacato al citatorio; de ahí la importancia de que ésta se deje en poder de una persona en el domicilio
señalado, pues ello asegura el conocimiento de la diligencia y da sustento al procedimiento de fijación, de
resultados reales tan aleatorios. Atento a lo anterior, el citatorio que se fija en la puerta del domicilio del
interesado para la notificación personal de emplazamiento a juicio, no puede estimarse legalmente hecho.

Contradicción de tesis 24/92. Entre el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito
y el entonces único y ahora Primer Tribunal Colegiado del Décimo Segundo Circuito. 21 de septiembre de
1992. Unanimidad de cuatro votos. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario: Marcos García José.

Tesis de Jurisprudencia 19/92. Aprobada por la Cuarta Sala de este alto Tribunal en sesión privada celebrada
el veintiuno de septiembre de mil novecientos noventa y dos. Unanimidad de cuatro votos de los señores
ministros: Presidente Carlos García Vázquez, Juan Díaz Romero, Ignacio Magaña Cárdenas y José Antonio
Llanos Duarte. Ausente: Felipe López Contreras, previo aviso

83
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

84. De acuerdo a lo dispuesto por la Ley Federal del Trabajo, en los casos en que la huelga tenga por
objeto la celebración o la revisión de un contrato-ley, en el escrito de emplazamiento a huelga se deberá
señalar el día y la hora en que se suspenderán las labores en las empresas que deban ser emplazadas al
procedimiento de huelga.

En este sentido ¿cuál es el plazo mínimo que debe mediar entre la fecha de presentación del escrito de
emplazamiento a huelga y la fecha en que se efectuará la suspensión de labores, y a partir de qué
momento comienza a computarse dicho plazo?

A. 10 días, y comenzará a computarse a partir de que surta efectos el emplazamiento.


B. 30 días y comienza a computarse a partir del día siguiente del que se presentó ante la Junta de
Conciliación y Arbitraje el escrito de emplazamiento a huelga.
C. 15 días y comienza a computarse el mismo día en que se presentó el emplazamiento a huelga ante la
junta.

Justificación:

Artículo 938. Si la huelga tiene por objeto la celebración o revisión del contrato ley, se observarán las
disposiciones de este Capítulo, con las modalidades siguientes:

I. El escrito de emplazamiento de huelga se presentará por los sindicatos coaligados, con una copia para cada
uno de los patrones emplazados, o por los de cada empresa o establecimiento, ante la Junta de Conciliación y
Arbitraje, o ante las autoridades mencionadas en el artículo 920 fracción II de esta Ley;

II. En el escrito de emplazamiento se señalará el día y la hora en que se suspenderán las labores, que
deberán ser treinta o más días posteriores a la fecha de su presentación ante la Junta de Conciliación y
Arbitraje.

III. Si el escrito se presenta ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, el Presidente, bajo su más estricta
responsabilidad, hará llegar a los patrones la copia del escrito de emplazamiento directamente dentro de las
veinticuatro horas siguientes a la de su recibo, o girará dentro del mismo término los exhortos necesarios, los
que deberán desahogarse por la autoridad exhortada, bajo su más estricta responsabilidad, dentro de las
veinticuatro horas siguientes a su recepción. Desahogados los exhortos, deberán devolverse dentro del mismo
término de veinticuatro horas; y

IV. Si el escrito se presenta ante las otras autoridades a que se refiere la fracción I, éstas, bajo su más estricta
responsabilidad, harán llegar directamente a los patrones la copia del escrito de emplazamiento, dentro de las
veinticuatro horas siguientes a la de su recibo. Una vez hecho el emplazamiento, remitirán el expediente a la
Junta de Conciliación y Arbitraje dentro del mismo término de veinticuatro horas.

84
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

85. Si el trabajador presenta pruebas con su demanda laboral y posteriormente dejan de comparecer
tanto él como su apoderado en la etapa de ofrecimiento y admisión de pruebas, la Junta:

A. Debe desechar las pruebas por no estar presentes.


B. Debe admitir las pruebas.
C. Debe admitirlas, siempre que esté justificada la incomparecencia del trabajador.

Justificación:

Registro No. 166096. Localización: Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta XXX, Octubre de 2009. Página: 97. Tesis: 2a./J. 163/2009. Jurisprudencia.
Materia(s): laboral

PRUEBAS PRESENTADAS CON LA DEMANDA LABORAL. DEBEN ADMITIRLAS Y


ANALIZARLAS LAS JUNTAS AUN CUANDO EL ACTOR O SU APODERADO NO
COMPAREZCAN A LA ETAPA DE OFRECIMIENTO Y ADMISIÓN.- La inasistencia del actor o de
su apoderado a la etapa de ofrecimiento y admisión de pruebas no pueden sancionarla las Juntas de
Conciliación y Arbitraje con el desechamiento de las pruebas exhibidas con el escrito inicial de demanda, al
no estar prevista en la Ley Federal del Trabajo, ya que conforme a su artículo 880 la ausencia del interesado a
la etapa relativa sólo trae como consecuencia la pérdida del derecho para ofrecer nuevas pruebas y objetar las
de su contraparte, por lo que en aquel supuesto las pruebas exhibidas con el escrito inicial de demanda deben
admitirse y analizarse en el momento procesal oportuno.

Contradicción de tesis 304/2009. Entre las sustentadas por el Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del
Sexto Circuito y los Tribunales Colegiados Primero del Vigésimo Circuito y Décimo Tercero en Materia del
Trabajo del Primer Circuito. 23 de septiembre de 2009. Cinco votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre
Anguiano. Secretario: Arnulfo Moreno Flores.

Tesis de jurisprudencia 163/2009. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
treinta de septiembre de dos mil nueve.

85
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

86. Tratándose de la concesión del amparo contra el artículo octavo transitorio del decreto de reformas
a la Ley del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, publicado en el Diario
Oficial el 6 de enero de 1997, ¿cuáles son los efectos que tiene la sentencia protectora?

A. Únicamente que no se aplique al quejoso el precepto declarado inconstitucional.


B. Que el Instituto entregue las aportaciones patronales acumuladas en la subcuenta de vivienda
correspondiente, en una sola exhibición y en el plazo de diez días, así como para que la Tesorería de
la Federación le entregue al Instituto referido las cantidades que previamente se le hubieren
transferido.
C. Que se deje sin efectos el acto de aplicación y no se vuelva a aplicar al quejoso, en el futuro, la norma
el declarada inconstitucional.

Justificación: Registro No. 161832. Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de
la Federación y su Gaceta, Tomo XXXIII, Junio de 2011, Página: 297. Tesis: 2a./J. 93/2011. Jurisprudencia.
Materia(s): Común

INSTITUTO DEL FONDO NACIONAL DE LA VIVIENDA PARA LOS TRABAJADORES.


EFECTOS DE LA CONCESIÓN DEL AMPARO CONTRA ACTOS DE APLICACIÓN DEL
ARTÍCULO OCTAVO TRANSITORIO DEL DECRETO POR EL QUE SE REFORMAN Y
ADICIONAN DIVERSAS DISPOSICIONES DE LA LEY RELATIVA, PUBLICADO EN EL DIARIO
OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 6 DE ENERO DE 1997. Esta Segunda Sala declaró inconstitucional
el indicado artículo transitorio conforme a la jurisprudencia 2a./J. 32/2006, de rubro: "INFONAVIT. EL
ARTÍCULO OCTAVO TRANSITORIO DEL DECRETO POR EL QUE SE REFORMA LA LEY
RELATIVA, PUBLICADO EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACIÓN EL 6 DE ENERO DE 1997,
TRANSGREDE EL ARTÍCULO 123, APARTADO A, FRACCIÓN XII, DE LA CONSTITUCIÓN
FEDERAL.", por lo que a fin de garantizar el principio de supremacía constitucional que busca evitar la
aplicación de leyes contrarias a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la subsistencia de
actos apoyados en preceptos declarados inconstitucionales por la jurisprudencia de esta Suprema Corte de
Justicia de la Nación, debe declararse la ilegalidad del acto fundado en tal norma legal y, concederse el
amparo para el efecto de que el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores entregue
las aportaciones patronales acumuladas en la subcuenta de vivienda con posterioridad al 30 de junio de 1997,
en una sola exhibición y en el improrrogable plazo de 10 días hábiles, el cual se estima prudente para cumplir
la sentencia de amparo, con fundamento en el punto quinto, fracción I, del Acuerdo General 12/2009 de 23 de
noviembre de 2009, del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, estimando además, que por la
fuerza obligatoria de estos fallos, la Tesorería de la Federación, que tiene a su cargo la custodia y
concentración de fondos de la propiedad o al cuidado del Gobierno Federal, en términos de los artículos 15 y
30 de la Ley del Servicio de Tesorería de la Federación, está obligada a entregar al INFONAVIT las
cantidades que le fueron previamente transferidas conforme al mencionado artículo octavo transitorio, y para
lo cual cuenta con igual plazo de 10 días, lo que se considera tomando en cuenta los trámites administrativos
que requiera efectuar.

Amparo en revisión 928/2010. Rodolfo Cárdenas Abundis. 11 de mayo de 2011. Cinco votos; José Fernando
Franco González Salas votó con salvedades. Ponente: Sergio A. Valls Hernández. Secretarias: María Marcela
Ramírez Cerrillo, Amalia Tecona Silva y Sofía Verónica Ávalos Díaz.

Amparo en revisión 930/2010. Alberto Peralta Piña. 11 de mayo de 2011. Cinco votos; José Fernando Franco
González Salas votó con salvedades. Ponente: Luis María Aguilar Morales. Secretarias: María Marcela
Ramírez Cerrillo, Amalia Tecona Silva y Sofía Verónica Ávalos Díaz.

Amparo en revisión 323/2011. Ricardo Mendoza Velázquez. 11 de mayo de 2011. Cinco votos; José
Fernando Franco González Salas votó con salvedades. Ponente: Sergio A. Valls Hernández. Secretarias:
María Marcela Ramírez Cerrillo, Amalia Tecona Silva y Sofía Verónica Ávalos Díaz.

Amparo en revisión 324/2011. Tomás Ramírez. 11 de mayo de 2011. Cinco votos; José Fernando Franco
González Salas votó con salvedades. Ponente: José Fernando Franco González Salas. Secretarias: María
Marcela Ramírez Cerrillo, Amalia Tecona Silva y Sofía Verónica Ávalos Díaz.

Amparo en revisión 325/2011. Teresa Lozano Ayala. 11 de mayo de 2011. Cinco votos; José Fernando
Franco González Salas votó con salvedades. Ponente: Luis María Aguilar Morales. Secretarias: María
Marcela Ramírez Cerrillo, Amalia Tecona Silva y Sofía Verónica Ávalos Díaz.

Tesis de jurisprudencia 93/2011. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
dieciocho de mayo de dos mil once.- Nota: La tesis 2a./J. 32/2006 y el Acuerdo General 12/2009 del Pleno de
la Suprema Corte de Justicia de la Nación citados, aparecen publicados en el Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomos XXIII, marzo de 2006, página 252 y XXX, diciembre de
2009, página 1687, respectivamente.

86
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

87. ¿Qué medio de impugnación procede en contra del auto dictado por el Presidente de la Junta de
Conciliación y Arbitraje, en el que resuelve sobre la prescripción de la acción para ejecutar un laudo?

A. El recurso de revisión previsto en el artículo 849 de la Ley Federal del trabajo, al tratarse de un acto
emitido dentro del procedimiento de ejecución.
B. El juicio de amparo indirecto, toda vez que dicho auto no pone fin al procedimiento de ejecución y en
consecuencia no admite recurso alguno.
C. El incidente de nulidad de actuaciones.

Justificación:

Registro No. 186133. Localización: Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta XVI, Agosto de 2002. Página: 374. Tesis: 2a./J. 95/2002. Jurisprudencia. Materia(s):
laboral

REVISIÓN EN EL JUICIO LABORAL. PROCEDE EN CONTRA DEL AUTO DICTADO POR EL


PRESIDENTE DE LA JUNTA DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE EN LA ETAPA DE
EJECUCIÓN DEL LAUDO, EN EL QUE RESUELVE SOBRE LA PRESCRIPCIÓN DE LA
ACCIÓN PARA EJECUTARLO, POR LO QUE DEBE AGOTARSE PREVIAMENTE A LA
PROMOCIÓN DEL JUICIO DE AMPARO. El artículo 849 de la Ley Federal del Trabajo establece la
procedencia del recurso de revisión en contra de los actos emitidos por los presidentes, actuarios o
funcionarios legalmente habilitados, en los supuestos de ejecución de los laudos, convenios y resoluciones
que ponen fin a las tercerías; así como en contra de los dictados en las providencias cautelares. Ahora bien, si
el acto reclamado consiste en la resolución dictada por el presidente de una Junta de Conciliación y Arbitraje,
en la etapa de ejecución del laudo, por la cual resuelve sobre la prescripción de la acción para ejecutarlo, es
necesario que antes de la promoción del juicio de amparo se agote el recurso de revisión previsto en el citado
precepto, toda vez que dicho acto fue emitido dentro del procedimiento de ejecución, como lo señalan los
dispositivos 617 y 618 de la referida ley, pues a través de ese medio de impugnación podrá revocarse,
modificarse o anularse tal acto presidencial y, con ello, cumplir con el principio de definitividad que rige la
procedencia del juicio de garantías, como deriva de lo establecido en la fracción XIII del artículo 73 de la Ley
de Amparo.

Contradicción de tesis 57/2002-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero del Octavo
Circuito, Segundo del Décimo Cuarto Circuito y Primero en Materias Administrativa y de Trabajo del
Séptimo Circuito. 9 de agosto de 2002. Cinco votos. Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Secretario:
Guillermo Becerra Castellanos.

Tesis de jurisprudencia 95/2002. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
veintitrés de agosto de dos mil dos

87
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

88. ¿En qué casos se actualiza el desistimiento tácito de la acción en el procedimiento laboral
burocrático federal?

A. Cuando no se presente promoción alguna en el término de tres meses, siempre que esa promoción sea
necesaria para la continuación del procedimiento
B. Cuando la parte interesada no presente promoción alguna en el término de seis meses, con
independencia de la trascendencia de ésta.
C. Cuando la parte demandada no lleve a cabo promoción alguna en el término de cuatro meses

Justificación:

(REFORMADO, D.O.F. 20 DE ENERO DE 1967)

ARTÍCULO 140.- Se tendrá por desistida de la acción y de la demanda intentada, a toda persona que no haga
promoción alguna en el término de tres meses, siempre que esa promoción sea necesaria para la continuación
del procedimiento. El Tribunal, de oficio o a peitción (sic) de parte, una vez transcurrido este término,
declarará la caducidad.

No operará la caducidad, aún cuando el término transcurra, por el desahogo de diligencias que deban
practicarse fuera del local del Tribunal o por estar pendientes de recibirse informes o copias certificadas que
hayan sido solicitadas.

88
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

89. Cuando en un juicio laboral se ofrece un documento en copia simple en términos del artículo 798 de
la Ley Federal del Trabajo, ¿requiere ser objetado por el demandado para que se ordene su
perfeccionamiento?

A. Sí, porque de lo contrario no podría llevarse a cabo su perfeccionamiento.


B. Es necesaria su objeción, de lo contrario adquiere valor probatorio pleno.
C. No es necesaria su objeción

Justificación:

Registro No. 178744. Localización: Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta XXI, Abril de 2005. Página: 734. Tesis: 2a./J. 44/2005. Jurisprudencia. Materia(s):
laboral

DOCUMENTO PRIVADO EN COPIA SIMPLE O FOTOSTÁTICA. EL OFRECIDO EN


TÉRMINOS DEL ARTÍCULO 798 DE LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO, NO REQUIERE QUE
SEA OBJETADO PARA QUE LA JUNTA LO MANDE PERFECCIONAR. Cuando se ofrece como
prueba un documento privado en copia simple o fotostática y se solicita, además, su compulsa o cotejo con el
original "para el caso de objeción", señalando el lugar en que se encuentre, en términos del artículo 798 de la
Ley Federal del Trabajo, no es necesario que dicho documento sea efectivamente objetado para que la
Junta ordene su perfeccionamiento a través de la compulsa o cotejo propuesto, porque ello implicaría
desvirtuar el propósito perseguido por el oferente consistente en mejorar el valor probatorio del documento
para salvar la objeción que pudiere hacerse, además de que sería ilógico que el perfeccionamiento dependiera
de la voluntad de su contraparte, esto es, de que decida o no objetarlo, máxime que la Ley Federal del Trabajo
establece la posibilidad de perfeccionar ese tipo de documentos sin la condición de la objeción aludida, como
se desprende de su artículo 807, de manera que debe considerarse que el perfeccionamiento ofrecido para el
caso de objeción no está condicionado a que aquélla exista.

Contradicción de tesis 202/2004-SS. Entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Sexto y Noveno,
ambos en Materia de Trabajo del Primer Circuito. 11 de marzo de 2005. Cuatro votos. Ausente: Genaro David
Góngora Pimentel. Ponente: Juan Díaz Romero. Secretario: César de Jesús Molina Suárez.

Tesis de jurisprudencia 44/2005. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
dieciocho de marzo de dos mil cinco.

89
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

90. En la Ley Federal del Trabajo no se prevé expresamente el término para promover el incidente de
nulidad de notificaciones.

De acuerdo a la jurisprudencia de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ¿qué


plazo debe establecerse para promover dicho incidente?

A. Debe estarse al plazo general de 3 días hábiles, contados a partir de que quien lo promueve tenga
conocimiento o se manifieste sabedor de la notificación que le agravia.
B. Puede promoverse en cualquier tiempo.
C. Sólo tratándose del patrón debe estarse al plazo general de 3 días hábiles previsto en el artículo 735
de la Ley Federal del Trabajo; el trabajador puede promoverlo en cualquier tiempo.

Justificación:

No. Registro: 180118. Jurisprudencia. Materia(s): Laboral. Novena Época. Instancia: Segunda Sala. Fuente:
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta XX, Noviembre de 2004. Tesis: 2a./J. 156/2004. Página: 69

NULIDAD DE NOTIFICACIONES EN EL PROCEDIMIENTO LABORAL. EL INCIDENTE RELATIVO


DEBE PROMOVERSE DENTRO DEL PLAZO GENÉRICO DE TRES DÍAS HÁBILES PREVISTO EN
EL ARTÍCULO 735 DE LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO, A PARTIR DE QUE EL AFECTADO
TENGA CONOCIMIENTO O SE MANIFIESTE SABEDOR DE LA ACTUACIÓN QUE LE AGRAVIA, Y
SE CONTARÁ EL DÍA DE SU VENCIMIENTO. El citado precepto establece un plazo genérico de tres días
hábiles para la realización o práctica de algún acto procesal o el ejercicio de un derecho cuando no tengan
fijado alguno, pero no prevé el momento a partir del cual inicia ni cuándo fenece, por lo cual debe tenerse en
cuenta el contenido del Título Catorce (Derecho Procesal del Trabajo), Capítulo VI (De los términos
procesales), de la Ley Federal del Trabajo, específicamente el artículo 733 que ordena que en el
procedimiento laboral los plazos comenzarán a correr el día siguiente al en que surta efecto la notificación, y
se contará en ellos el día del vencimiento, y el diverso 764, del cual se advierte que el elemento que debe
atenderse para considerar que surte efectos una notificación mal hecha u omitida, es el relativo al momento en
el que el afectado tiene conocimiento de la actuación procesal, es decir, el momento en el que se ostenta
sabedor de ella. En tal virtud, se concluye que el incidente de nulidad de notificaciones en el procedimiento
laboral deberá promoverse dentro del plazo genérico de tres días hábiles, contados a partir del momento en el
que el afectado tenga conocimiento o se manifieste sabedor de la actuación procesal cuya nulidad promueve,
y se contará el día de su vencimiento.

Contradicción de tesis 107/2004-SS. Entre las sustentadas por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia de
Trabajo del Cuarto Circuito y el Sexto Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito. 1o. de
octubre de 2004. Unanimidad de cuatro votos. Ausente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente: Sergio
Salvador Aguirre Anguiano. Secretaria: Alma Delia Aguilar Chávez Nava.

Tesis de jurisprudencia 156/2004. Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del
quince de octubre de dos mil cuatro.

90
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

91. El artículo 20 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos regula el derecho a la


nacionalidad. Conforme al derecho interno de un Estado americano parte, una persona carece de
nacionalidad.

¿A cuál nacionalidad tiene derecho conforme a la Convención?

A. A la del lugar de su residencia.


B. A la nacionalidad de sus progenitores.
C. A la del territorio de su nacimiento.

Justificación:

Convención Americana sobre Derechos Humanos

Artículo 20. Derecho a la Nacionalidad

1. Toda persona tiene derecho a una nacionalidad.

2. Toda persona tiene derecho a la nacionalidad del Estado en cuyo territorio nació si no tiene derecho
a otra.

3. A nadie se privará arbitrariamente de su nacionalidad ni del derecho a cambiarla.

91
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

92. El artículo 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos reconoce el principio de
publicidad de los juicios.

En términos de esa disposición, ¿cuál es la regla que se establece para la publicidad de las sentencias?

A. Ordena la publicidad amplia de las sentencias sin prever excepción alguna.


B. Toda sentencia en materia penal o contenciosa será pública, excepto en los casos en que el interés de
menores de edad exija lo contrario, o en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la
tutela de menores.
C. Establece la publicidad de las sentencias, con excepción de la materia penal y en aquellos casos en
que se afecte el interés de menores de edad.

Justificación:

Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos

Artículo 14

1. Todas las personas son iguales ante los tribunales y cortes de justicia. Toda persona tendrá derecho a ser
oída públicamente y con las debidas garantías por un tribunal competente, independiente e imparcial,
establecido por la ley, en la substanciación de cualquier acusación de carácter penal formulada contra ella o
para la determinación de sus derechos u obligaciones de carácter civil. La prensa y el público podrán ser
excluidos de la totalidad o parte de los juicios por consideraciones de moral, orden público o seguridad
nacional en una sociedad democrática, o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la
medida estrictamente necesaria en opinión del tribunal, cuando por circunstancias especiales del asunto la
publicidad pudiera perjudicar a los intereses de la justicia; pero toda sentencia en materia penal o
contenciosa será pública, excepto en los casos en que el interés de menores de edad exija lo contrario, o
en las acusaciones referentes a pleitos matrimoniales o a la tutela de menores.

92
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

93. En la sentencia emitida por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Radilla
Pacheco vs. Estados Unidos Mexicanos, ese tribunal internacional consideró que se violó el derecho de
acceso a la justicia, dado que en la investigación de ese caso participó la jurisdicción militar.

Respecto a esta determinación, la Corte Interamericana reiteró el siguiente criterio:

A. La necesidad de derogar el fuero militar, y que sea la justicia ordinaria quien conozca de todos los
delitos, sin que sea relevante la calidad de quien lo comete ni los bienes jurídicos lesionados.
B. En el fuero militar sólo se debe juzgar a militares activos por la comisión de delitos o faltas que por
su propia naturaleza atenten contra bienes jurídicos propios del orden militar, y están excluidos de
ella los delitos que impliquen violación de derechos humanos.
C. Sin emitir pronunciamiento general sobre la jurisdicción penal militar, se consideró que la
investigación y juzgamiento de la desaparición forzada están excluidos del fuero militar.

Justificación:

Sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso Radilla Pacheco vs. Estados Unidos
Mexicanos

272. El Tribunal considera pertinente señalar que reiteradamente ha establecido que la jurisdicción penal
militar en los Estados democráticos, en tiempos de paz, ha tendido a reducirse e incluso a desaparecer, por lo
cual, en caso de que un Estado la conserve, su utilización debe ser mínima, según sea estrictamente necesario,
y debe encontrarse inspirada en los principios y garantías que rigen el derecho penal moderno. En un Estado
democrático de derecho, la jurisdicción penal militar ha de tener un alcance restrictivo y excepcional y estar
encaminada a la protección de intereses jurídicos especiales, vinculados a las funciones propias de las fuerzas
militares. Por ello, el Tribunal ha señalado anteriormente que en el fuero militar sólo se debe juzgar a
militares activos por la comisión de delitos o faltas que por su propia naturaleza atenten contra bienes
jurídicos propios del orden militar.

273. Asimismo, esta Corte ha establecido que, tomando en cuenta la naturaleza del crimen y el bien jurídico
lesionado, la jurisdicción penal militar no es el fuero competente para investigar y, en su caso, juzgar y
sancionar a los autores de violaciones de derechos humanos sino que el procesamiento de los responsables
corresponde siempre a la justicia ordinaria276. En tal sentido, la Corte en múltiples ocasiones ha indicado que
“[c]uando la justicia militar asume competencia sobre un asunto que debe conocer la justicia ordinaria, se ve
afectado el derecho al juez natural y, a fortiori, el debido proceso”, el cual, a su vez, se encuentra íntimamente
ligado al propio derecho de acceso a la justicia. El juez encargado del conocimiento de una causa debe ser
competente, además de independiente e imparcial.

93
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

94. En un tratado internacional del que México es parte, que regula las relaciones diplomáticas entre
los Estados, se prevé el derecho de asistencia consular a quienes sean procesados en un país extranjero.

En México alguien exige el respeto de ese derecho, en la vía de amparo. El juez desestima el concepto de
violación, porque el tratado no es de derechos humanos, y en dado caso se trata de una convención que
regula prerrogativas diplomáticas.

¿Es correcta la actuación del juez?

A. Sí, porque el artículo 1º de la Constitución sólo protege los derechos humanos en ella reconocidos.
B. Sí, porque el artículo 1º de la Constitución sólo protege los derechos humanos reconocidos en la
propia ley fundamental y en los tratados en materia de derechos humanos, siendo que el tratado
invocado por el quejoso no tiene este carácter.
C. No, porque el artículo 1º de la Constitución ordena la protección de los derechos humanos
reconocidos en la Constitución y los tratados internacionales en los que el Estado mexicano sea parte,
sin que haga distinción alguna.

Justificación:

Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos

Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos
reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea
parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo
en los casos y bajo las condiciones que esta Constitución establece.

Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de conformidad con esta Constitución y con los
tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia.

Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger
y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia,
indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las
violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley.

(…)

Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las
discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias
sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o
menoscabar los derechos y libertades de las personas.

94
DECIMOSÉPTIMO CONCURSO INTERNO DE OPOSICIÓN PARA LA DESIGNACIÓN DE JUECES DE DISTRITO.- JUSTIFICACIÓN

95. ¿Cuál es el alcance de la protección a la vida que otorga la Convención Americana sobre Derechos
Humanos?

A. La Convención protege la vida desde el nacimiento.


B. La Convención protege la vida de los seres humanos a partir del cuarto mes de la concepción.
C. La Convención protege la vida, en general, desde el momento de la concepción.

Justificación:

Convención Americana sobre Derechos Humanos

Artículo 4. Derecho a la Vida


1. Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley y, en
general, a partir del momento de la concepción. Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente.

Declaración interpretativa formulada por el Estado mexicano

Con respecto al párrafo 1 del Articulo 4 considera que la expresión “en general” usada en el citado párrafo no
constituye obligación de adoptar o mantener en vigor legislación que proteja la vida “a partir del momento de
la concepción”, ya que esta materia pertenece al dominio reservado de los Estados.

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96. La Convención Americana sobre Derechos Humanos otorga facultades consultivas a la Corte
Interamericana de Derechos Humanos.

¿Cuáles son los instrumentos internacionales que pueden ser materia de esa facultad consultiva?

A. Sólo la Convención Americana sobre Derechos Humanos.


B. La Convención Americana sobre Derechos, la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del
Hombre y otros tratados internacionales adoptados en el seno de la Organización de Estados
Americanos.
C. La Convención Americana de Derechos y otros tratados concernientes a la protección de los derechos
humanos en los Estados americanos.

Justificación:

Convención Americana sobre Derechos Humanos

Artículo 64

1. Los Estados miembros de la Organización podrán consultar a la Corte acerca de la interpretación de esta
Convención o de otros tratados concernientes a la protección de los derechos humanos en los Estados
americanos. Asimismo, podrán consultarla, en los que les compete, los órganos enumerados en el capítulo X
de la Carta de la Organización de los Estados Americanos, reformada por el Protocolo de Buenos Aires.

2. La Corte, a solicitud de un Estado miembro de la Organización, podrá darle opiniones acerca de la


compatibilidad entre cualquiera de sus leyes internas y los mencionados instrumentos internacionales.

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97. En el caso Castañeda Gutman, se analizó la existencia de un recurso efectivo en México para
proteger los derechos político-electorales del ciudadano. ¿Cuál fue el pronunciamiento de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos respecto al juicio de amparo?

A. Que la exclusión de la materia electoral de ese medio de defensa resulta contraria al artículo 25 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos.
B. Que el juicio de amparo no es la vía adecuada para plantear la impugnación del actor, sin que la
exclusión de la materia electoral de ese medio de defensa resultara, por sí sola, contraria al artículo 25
de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
C. Que debió realizarse una interpretación de la Ley de Amparo conforme al artículo 25 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, a fin de analizar la inconstitucionalidad de la ley
electoral, lo cual no debe estar excluido de la materia de ese medio de defensa.

Justificación:

Caso Castañeda Gutman v. Estados Unidos Mexicanos. Excepciones preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 6 de agosto de 2008. Serie C Núm. 184.

91. La Corte observa que tanto la Comisión como los representantes destacaron la ausencia de un recurso
sencillo, rápido y efectivo para que la presunta víctima reclamara la protección de sus derechos reconocidos
por la Constitución, para sustentar la alegada violación del artículo 25 de la Convención. En este sentido, la
Corte considera, al igual que la Comisión y el Estado, que el recurso de amparo interpuesto por la presunta
víctima no era la vía adecuada en ese caso, dada su improcedencia en materia electoral.

92. Este Tribunal estima que no es en sí mismo incompatible con la Convención que un Estado limite el
recurso de amparo a algunas materias, siempre y cuando provea otro recurso de similar naturaleza e igual
alcance para aquellos derechos humanos que no sean de conocimiento de la autoridad judicial por medio del
amparo. Ello es particularmente relevante en relación con los derechos políticos, derechos humanos de tal
importancia que la Convención Americana prohíbe su suspensión así como la de las garantías judiciales
indispensables para su protección (infra párr. 140).

(…)

94. Para la Corte el requisito de que la decisión sea razonada, no es equivalente a que haya un análisis sobre el
fondo del asunto, estudio que no es imprescindible para determinar la efectividad del recurso. La existencia y
aplicación de causales de admisibilidad de un recurso resulta compatible con la Convención Americana 30 y la
efectividad del recurso implica que, potencialmente, cuando se cumplan dichos requisitos, el órgano judicial
evalúe sus méritos. [30 Al respecto la Corte ha dicho: “[…] Por razones de seguridad jurídica, para la correcta
y funcional administración de justicia y la efectiva protección de los derechos de las personas, los Estados
pueden y deben establecer presupuestos y criterios de admisibilidad de los recursos internos, de carácter
judicial o de cualquier otra índole. De tal manera, si bien esos recursos internos deben estar disponibles para
el interesado y resolver efectiva y fundadamente el asunto planteado, así como eventualmente proveer la
reparación adecuada, no cabría considerar que siempre y en cualquier caso los órganos y tribunales internos
deban resolver el fondo del asunto que les es planteado, sin que importe la verificación de los presupuestos
formales de admisibilidad y procedencia del particular recurso intentado” (énfasis agregado).

Cfr. Caso Trabajadores Cesados del Congreso (Aguado Alfaro y otros), supra nota 13, párr. 126].

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98. En el artículo 18 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, se protege el derecho a la
libertad de pensamiento, de conciencia y de religión.

¿Cuáles son los alcances de la libertad a manifestar las propias creencias y religión previstos en ese
Pacto?

A. Sólo incluye la libertad de manifestarlas colectivamente y en público, mediante culto o celebración de


ritos, mas no garantiza expresamente la manifestación individual o en privado.
B. Incluye la libertad de manifestarlas colectivamente, tanto en público como en privado, mediante
culto, celebración de ritos, las prácticas y la enseñanza, mas no la garantiza en su ejercicio individual.
C. Tiene el alcance de proteger el ejercicio de esa libertad de manera individual o colectiva, tanto en
público como en privado, mediante culto, celebración de ritos, las prácticas y la enseñanza.

Justificación:

Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos

Artículo 18

1. Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye
la libertad de tener o de adoptar la religión o las creencias de su elección, así como la libertad de manifestar su
religión o sus creencias, individual o colectivamente, tanto en público como en privado, mediante el culto, la
celebración de los ritos, las prácticas y la enseñanza.

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99. En la sentencia del caso Castañeda Gutman v. Estados Unidos Mexicanos, la Corte Interamericana
de Derechos Humanos analizó si el juicio para la protección de derechos político-electorales del
ciudadano constituía o no un recurso efectivo.

¿Cómo define la corte interamericana el recurso efectivo?

A. El recurso que es de fácil acceso, de tramitación expedita y sin dilaciones, y con ejecución efectiva de
sus fallos.
B. El recurso judicial expedito en el que el tribunal competente emite sentencia de fondo razonada
respecto a la violación de derechos humanos.
C. El recurso que es capaz de conducir a un análisis del tribunal competente a fin de establecer si ha
habido una violación a los derechos humanos y, en su caso, proporcionar una reparación.

Justificación:

Caso Castañeda Gutman v. Estados Unidos Mexicanos. Excepciones preliminares, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 6 de agosto de 2008. Serie C Núm. 184.

118. Sobre este punto la Corte está llamada a determinar si el juicio para la protección de los derechos
político-electorales del ciudadano constituía o no un recurso efectivo. Un recurso judicial efectivo es aquel
capaz de producir el resultado para el que ha sido concebido34, es decir, debe ser un recurso capaz de
conducir a un análisis por parte de un tribunal competente a efectos de establecer si ha habido o no una
violación a los derechos humanos y, en su caso, proporcionar una reparación35.

[34 Cfr. Caso Velásquez Rodríguez, supra nota 19, párr. 66; Caso Ximenes Lopes, supra nota 26, párr. 192,
Caso Yvon Neptune, supra nota 19, párr. 77. 35 Cfr. supra notas 29 y 31. Ver también: Garantías Judiciales en
Estados de Emergencia, supra nota 25, párr. 24].

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100. La Convención Americana sobre Derechos Humanos regula ciertas garantías judiciales. Una de
ellas es el derecho de defensa en un proceso penal.

De acuerdo con la Convención, ¿cuáles son los alcances de ese derecho en cuanto a la asistencia de
defensor?

A. Autoriza que el inculpado sea asistido por el defensor de su elección o por el del Estado, pero prohíbe
la defensa por el propio inculpado.
B. Autoriza que el inculpado se defienda personalmente, o bien que sea asistido por el defensor de su
elección o por el del Estado.
C. Sólo exige que el inculpado sea asistido por defensor, pero no contiene ninguna disposición sobre la
designación de un defensor público o el derecho de defenderse personalmente.

Justificación:

Convención Americana sobre Derechos Humanos

Artículo 8. Garantías Judiciales

1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo razonable, por un juez
o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la sustanciación
de cualquier acusación penal formulada contra ella, o para la determinación de sus derechos y obligaciones de
orden civil, laboral, fiscal o de cualquier otro carácter.

2. Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se establezca
legalmente su culpabilidad. Durante el proceso, toda persona tiene derecho, en plena igualdad, a las
siguientes garantías mínimas:

a. derecho del inculpado de ser asistido gratuitamente por el traductor o intérprete, si no comprende o no
habla el idioma del juzgado o tribunal;

b. comunicación previa y detallada al inculpado de la acusación formulada;

c. concesión al inculpado del tiempo y de los medios adecuados para la preparación de su defensa;

d. derecho del inculpado de defenderse personalmente o de ser asistido por un defensor de su elección y de
comunicarse libre y privadamente con su defensor;

e. derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado por el Estado, remunerado o no según
la legislación interna, si el inculpado no se defendiere por sí mismo ni nombrare defensor dentro del plazo
establecido por la ley;

f. derecho de la defensa de interrogar a los testigos presentes en el tribunal y de obtener la comparecencia,


como testigos o peritos, de otras personas que puedan arrojar luz sobre los hechos;

g. derecho a no ser obligado a declarar contra sí mismo ni a declararse culpable, y

h. derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior.

3. La confesión del inculpado solamente es válida si es hecha sin coacción de ninguna naturaleza.

4. El inculpado absuelto por una sentencia firme no podrá ser sometido a nuevo juicio por los mismos hechos.

5. El proceso penal debe ser público, salvo en lo que sea necesario para preservar los intereses de la justicia.

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