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Según estimaciones policiales, la población flotante de San Andrés excede en un 60% a la población
residente, lo que equivale aproximadamente a 50.000 personas que diariamente concurren a
trabajar o a realizar trámites en el sector central.
Durante los últimos tres años se ha verificado un incremento sostenido de las denuncias por delitos,
llegando a las 2.500 por cada 100 mil habitantes, lo que excede tanto la tasa regional, como la
nacional. Del mismo modo, se constata que el 70% de los delitos se cometen en el perímetro central,
compuesto por nueve manzanas. Del total de delitos denunciados, los tres más significativos son: el
robo por sorpresa (40%), el hurto (25%) y el robo con intimidación (15%). Según el sistema de
información geográfica de la policía, las denuncias se concentran especialmente en dos cuadras.
Se puede explicar la concentración en el área referida desde un punto de vista situacional, por
tratarse de las calles de mayor concentración comercial y financiera de la comuna, y por tanto,
donde concurre una gran cantidad de transeúntes. Del mismo modo, el flujo peatonal ha estimulado
la instalación y expansión del comercio ambulante, que estrecha las veredas y aumenta la
congestión, favoreciendo la acción delictual.
Desde el punto de vista de las respuestas institucionales, el último semestre la policía efectuó 30
detenciones por delito flagrante. Sin embargo, tan sólo en ocho casos hubo formalización judicial de
cargos (dos por robo con violencia y seis por hurto), mientras que en el resto de los casos, se
procedió al archivo provisional por falta de antecedentes. En efecto, en la mayoría de los casos, los
detenidos lograron desprenderse de las especies antes de ser aprehendidos, con la ayuda de
cómplices; del mismo modo, no se contó con testigos del delito. Tanto la fiscalía como la policía
coinciden en que un sistema de cámaras de vigilancia permitiría inhibir la comisión de delitos en el
área central y aportar medios de prueba efectivos en los procesos que se abran.
Dada esta situación, los comerciantes del sector en conjunto con la Universidad de San Andrés,
aplicaron una encuesta de percepción de temor a 1.000 transeúntes del centro urbano, cuyos
resultados señalan que el 70% de los encuestados piensa que la delincuencia ha aumentado en el
centro de la ciudad durante el último año; mientras que un 30% de ellos señala evitar trasladarse al
perímetro central. Se tiene la intención de aplicar esta misma encuesta una vez transcurridos dos
meses de concluido el proyecto.
OBJETIVOS:
OBJETIVO GENERAL
Reducir la delincuencia en el centro de San Andrés y la sensación de temor del público que
concurre a él.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
Objetivo Nº1 Meta asociada:
Disminuir la Reducción del 50% en la percepción de inseguridad de los transeúntes del
percepción de temor perímetro central, a dos meses de implementada la obra.
en la ciudadanía.
Objetivo Nº2 Metas asociadas:
Reducir los delitos de Reducción de un 50% de las denuncias por robo en el perímetro central
robo en el centro de la comuna, a dos meses de implementada la obra.
urbano de la comuna. Aumento en un 30% de la proporción de formalizaciones judiciales a
partir de las detenciones flagrantes.
LOCALIZACIÓN:
El proyecto se ejecutará en el centro urbano de San Andrés, específicamente en el área
conformada por las calles Santa Fe, Vergara, Independencia y Chacabuco.
POBLACIÓN OBJETIVO / COBERTURA
El proyecto beneficiará directamente a la población que a diario trabaja y/o debe transitar por el
perímetro central de la comuna, estimada en aproximadamente 50.000 personas, población
compuesta mayoritariamente por personas adultas de ambos sexos.
ACTIVIDADES
3. Aplicación de una encuesta de percepción de temor por parte de la Universidad de San Andrés.
RESPONSABLES
La Unión Comunal de Juntas de Vecinos es la organización adjudicataria del Fondo Nacional de
Seguridad, pero formalizará un mandato a la Municipalidad para la licitación de la obra. La
Municipalidad, por su parte, diseñará las bases de la licitación y hará un llamado a las empresas del
rubro.
La Asociación de Comercio, junto con su aporte económico para la compra de las cámaras de
vigilancia, financiará íntegramente la confección, impresión y distribución de las cartillas de
autocuidado y de los pasacalles.
La Universidad de San Andrés aplicará la encuesta al término de la obra, para medir la percepción
de temor.
La policía se encargará de la operación de las cámaras de vigilancia.
TIEMPO DE EJECUCIÓN