Almacenamiento y transporte de gases.

Cuando se requieren cantidades pequeñas a intermedias de hidrógeno, el hidrógeno gaseoso se

comprime y almacena en recipientes de alta presión. Los tanques de almacenamiento convencionales de
aluminio y acero se utilizan habitualmente para contener Hidrógeno a presiones de hasta 40 MPa 2).
Remolques de tubo, diseñados para el servicio de carreteras, cantidades de transporte en el Rango de
300 000 litros a 500 000 litros.

Almacenamiento y transporte de líquidos.

Otro enfoque para el almacenamiento de hidrógeno es condensar el hidrógeno en un líquido o

aguanieve (hidrógeno sólido).mezclado con el líquido). Esto requiere enfriar el hidrógeno a temperaturas
criogénicas (aproximadamente 20 K) para formar una Líquido y por debajo de 14 K para formar
aguanieve hidrógeno. En la actualidad, el hidrógeno slush sólo ha sido considerado como un El
propelente aeroespacial y la economía para la producción no favorecen su uso más extenso. Para
mantener el hidrógeno como fluido criogénico en almacenamiento, la exposición al calor a nivel del
ambiente debe ser minimizada o excesiva Se producirá una pérdida de hidrógeno. Este aislamiento del
calor se logra mejor usando un contenedor con cubierta al vacío, No a diferencia de un termo. Ningún
aislamiento es perfecto, y sin captura y relicatura, la lenta pérdida de el hidrógeno a la atmósfera debe
ser aceptado a menos que la tasa de uso exceda la tasa de ebullición, o alternativamente se adopta un
sistema de gestión de ebullición. El transporte de hidrógeno líquido se realiza en contenedores con
camisa de vacío por camión, vagón o camión cisterna, y luego de su entrega se transfiere a los
recipientes de almacenamiento criogénico de camisa de vacío en los sitios de punto de uso. Se utilizan
sistemas de almacenamiento de hasta 3 700 000 litros para aplicaciones aeroespaciales. Sin embargo, el
hidrógeno líquido criogénico no puede almacenarse indefinidamente a menos que sea Refrigerado, lo
cual no es económico para la mayoría de las aplicaciones. El hidrógeno líquido se usa o se pierde con el
tiempo el entorno.

Uso del hidrógeno

Las aplicaciones de uso de hidrógeno incluyen celdas de combustible, motores de combustión interna,
turbinas, propulsores de cohetes y todas las aplicaciones que utilizan estos componentes.

Una variedad de aplicaciones de energía basadas en electrolizadores y sistemas de celdas de

combustible de hidrógeno pronto estarán disponibles comercialmente. Estos incluyen desde pequeños
sistemas portátiles diseñados para reemplazar baterías estándar, como celdas “D”, hasta 1 kW, 10 kW, y
sistemas más grandes diseñados para sistemas de energía remotos o distribuidos necesarios para
alimentar hogares, aldeas remotas o aumentar la red eléctrica. Los sistemas portátiles generalmente
dependen de un suministro de hidrógeno que se reemplaza o se recarga. Se contemplan sistemas más
grandes con fuentes de energía renovables integradas, como sistemas de energía eólica o sistemas
fotovoltaicos. Estos sistemas son productores y consumidores de hidrógeno, ya que convierten la
electricidad en hidrógeno, almacenan la energía en un medio de almacenamiento y luego la convierten
de nuevo en electricidad cuando es necesario. Esto se hace con un electrolizador que convierte la
energía renovable en hidrógeno. El hidrógeno se procesa para su almacenamiento y se utiliza con una
celda de combustible o una unidad combinada de generación de calor y energía para producir
electricidad a pedido. Dichos sistemas pueden integrarse adicionalmente para capturar el calor residual
para procesos de calefacción o industriales. Estas aplicaciones consisten en un componente que realiza la
función principal y los componentes que controlan, hacen seguros, suministran hidrógeno, almacenan
hidrógeno o, de lo contrario, respaldan la función principal.