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CaracasAir
N.I.A: 1910139
INTRODUCCIÓN
Las civilizaciones organizadas más antiguas: los mayas, los aztecas, los Judíos,
los egipcios, los romanos, entre otras, ingeniaron sistemas de leyes para organizar sus
ciudades y para regular los actos buenos de los actos malos, para definir un orden social
jerárquicamente aceptable y justo para cada persona, que a su vez permitía que los
habitantes de esas civilizaciones respetaran dicho orden y hubiese un crecimiento
personal y colectivo organizado.
Lógicamente todos estos sistemas de leyes se han ido modificando a través de los
siglos gracias a que la civilización humana ha sometido a millones de cambios y a un
crecimiento tecnológico y social asombroso, ahora las jerarquías tienen nombres que
son de orden público y que son elegidas por los mismos ciudadanos de cada país,
ciudad, municipio, sector, ahora somos más organizados y tenemos muchas
herramientas que nos permiten vivir de forma organizada. Ahora tenemos por ejemplo en
el caso de Venezuela un Ejecutivo Nacional y un Poder Público, que a su vez está
conformado por el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo, el Poder Electoral, el Poder
Judicial y el Poder Moral, cada uno de estos poderes se encargan de crear las leyes por
las que los venezolanos nos dirigimos, buscan generar un orden social aceptable, justo y
equitativo para cada ciudadano, también procuran hacer cumplir dichas leyes y nos
facilita una pirámide ordenada de organismos públicos e incluso privados a los que
podemos acudir siempre que lo necesitemos, por ejemplo en Venezuela el organismo
público que se encarga de regular las actividades relacionadas a la aeronáutica civil
(desde la instrucción aeronáutica, el otorgamiento de licencias, hasta el derecho y la
actividad de explotar la industria aeronáutica en Venezuela, es decir todo lo relacionado
con esta rama) es el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (I.N.A.C), que a su vez se
adapta y acopla al ente que organiza y regula las actividades de aviación civil
internacional que es el Organización de Aviación Civil Internacional (O.A.C.I), y el
instrumento principal que usa el I.N.A.C para promover una gestión de aviación civil
efectiva es la Ley de Aeronáutica Civil (L.A.C) que se define como ‘’la ley que regula el
conjunto de actividades relativas al transporte aéreo, la navegación aérea y otras
vinculadas con el empleo de las aeronaves civiles donde ejerza su jurisdicción la
República Bolivariana de Venezuela’’
Capítulo I De la Aeronave
Arrendamiento de Aeronave
Este artículo define que una vez rentada una aeronave este arrendatario pasa a
ser el explotador, y que puede arrendar una aeronave con o sin tripulación, no
necesariamente deberá contar con una tripulación para hacer el arrendamiento de una
aeronave, ahora bien cuando el arrendador transfiere su condición de explotador al
arrendatario le está dejando a este toda la responsabilidad a partir de ese momento,
entonces cabría preguntar ¿si sucede un infortunio, siniestro, accidente o incidente con
esa aeronave? ¿Quién será responsable, el arrendador o el arrendatario? El arrendatario
al firmar el contrato de arrendamiento de la aeronave y adquirir el carácter de explotador
será el responsable, pero claro está que; de acuerdo a lo establecido en los artículos 36
(documentación de abordo) articulo 37 (certificado de aeronavegabilidad) y el articulo 38
(calificación de productos y partes) de la ley de aeronáutica civil, el arrendador está en la
obligación de entregar estos documentos vigentes al arrendatario para garantizarle que la
aeronave están en una condición optima de aeronavegabilidad.
Fletamento de aeronave
Este articulo podría resultar confuso, pero en general define que en el fletamento
de una aeronave la condición de explotador permanece sobre el fletante (contario al
1 Ley de Aeronáutica Civil (N° 6.637). Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 39.140, Marzo
17, 2009.
2 Ibídem.
artículo 31 donde el carácter de explotador pasa a ser del arrendatario), en este caso el
fletante y el fletador hacen un contrato bilateral, en el que el fletante pone a disposición
del fletador una aeronave en condiciones de aeronavegabilidad, equipada y puede ser
provista de tripulación, el fletante se compromete sea por un viaje o más (dependiendo de
lo que se haya estipulado en el contrato de fletamento referente a esto) a conseguir un
resultado junto al fletador sin abandonar el carácter de explotador, también el fletante
debe establecer obligatoriamente en el contrato la capacidad (carga, pasajeros,
tripulación) que puede usar el fletador de la aeronave, el precio por el uso y por parte de
quien ira la tripulación y en caso de infortunios, siniestros, accidentes o incidentes a
bordo de esta aeronave el fletante al mantener la condición de explotador será
responsable, pero compartirán responsabilidad ante un infortunio, siniestro, accidente y/o
incidente a bordo el fletante y el fletador dependiendo de las condiciones especificadas
en el contrato de fletamento y de igual modo los artículos 36, 37 y 38 de la Ley de
Aeronáutica Civil serán aplicables en caso de un contrato de fletamento. Este artículo
podría aplicar muy bien para vuelos chárter.
3 Ibídem.
Capítulo V Aviación Comercial
El artículo expresa con claridad que no es permitido portar armas tanto para
pasajeros, como para la tripulación y el personal observador o técnico que va a bordo de
la aeronave, sin embargo hay casos en los que el capitán de la aeronave pudiese aceptar
el porte de armas de fuego a bordo: cuando la tripulación lleva a bordo un ‘’pasajero bajo
custodia’’ (personas que están siendo sometidas a un proceso judicial, administrativo o
4 Ibídem.
5 Ibídem.
penal) esta clase de pasajeros tiene el acompañamiento especial de al menos uno o dos
funcionarios (dependiendo del nivel de peligrosidad del custodiado) de orden público
armados, y aunque los custodios no deben portar equipos o artefactos que contengan
gas lacrimógeno o paralizante (ya que la activación de estos gases dentro de la aeronave
afectaría la seguridad total del vuelo) pueden portar armas de fuego; en estos casos el
capitán será el que decida si acepta llevar a bordo esta clase de pasajero o no siendo
este uno de los pocos casos en los que el ordenamiento jurídico hace excepción a lo
previsto en el artículo. La Ley de Aeronáutica Civil en el capítulo III ‘’De los delitos
aeronáuticos y conexos’’ en los artículos 140 y 147 declara las consecuencias de carácter
legal y penal para todo aquel que haga omisión de lo establecido en el artículo 73 acerca
del porte de armas a bordo.
Las aeronaves civiles a las que se les pueda aplicar el artículo 2 de la Ley de
Aviación Civil en cualquiera de los cuatro casos, que sufran infortunio, siniestro,
accidentes o incidentes serán objeto de investigación de la Junta investigadora de
Accidentes de Aviación de Venezuela , pero ciertamente se pueden presentar casos de
infortunios con diversas características, podría suceder algo similar a lo ocurrido en el
siniestro del vuelo 708 de West Caribbean Airways que cubría la ruta de Ciudad de
Panamá-Martinica el martes 16 de agosto de 2005, este avión se estrelló en la Sierra de
Perijá (edo-Zulia), dejando un saldo de 152 pasajeros de nacionalidad francesa y ocho
tripulantes de nacionalidad colombiana, fallecidos. Este caso presenta un siniestro que
afecto a jurisdicciones diferentes: Panamá como estado contratado, Martinica como
estado contratante, Venezuela como receptor del siniestro y Colombia por la pérdida de
ocho ciudadanos licenciados de la aviación de ese país, entonces claramente Venezuela
será el primero en iniciar las labores de búsqueda y rescate (según lo establecido en la
R.A.V 279 y en el anexo 12 del convenio de Chicago) y seguramente la Junta
Investigadora de Accidentes de Aviación de Venezuela, será el primer organismo en abrir
un expediente de investigación por los efectos producidos por dicho siniestro en nuestra
jurisdicción, pero ¿Qué pasara con los demás países envueltos que también harán
6 Ibídem.
investigaciones del siniestro? El anexo 13 del Convenio Chicago, está diseñado para
tratar estos asuntos de la investigación de accidentes e incidentes de la aviación civil,
además los artículos 97, 98, y 99 de la Ley de Aviación Civil de Venezuela amplían la
información acerca de las potestades que posee la Junta Investigadora de Accidentes de
Aviación de Venezuela. Por otro lado, en caso de que el accidente o incidente ocurra en
una aeronave de estado el organismo encargado será la Directiva de Investigación de
Accidentes Aéreos de la Armada Nacional Bolivariana según lo expuesto en la resolución
N° 004251 el 31 de marzo del 20104 en la ciudad de Caracas- Venezuela.
CONCLUSIÓN
Sin duda alguna el ejercicio de la Lay y el Derecho resultan ser las mejores
herramientas para construir una sociedad organizada, civilizada y que camine hacia el
progreso. El ordenamiento jurídico de un país permite que todos sus ciudadanos puedan
moverse libremente pero respetando los límites de lo correcto y lo que no es correcto,
además permite el crecimiento comercial, tecnológico, educativo, agrario, aeronáutico,
etcétera; de una forma ordenada. Una sociedad sin Ley y sin autoridades podría ser
sinónimo de anarquía, decrecimiento y destrucción, y es que no debe buscar alterarse lo
que por instinto y naturaleza ya está establecido: la entera civilización humana necesita
regirse por un sistema de leyes, así como el universo se mueve y funciona de acuerdo a
leyes físicas específicas y el reino animal respeta el sistema de jerarquías que el instinto
les ha provisto; los humanos nos dividimos en sociedades organizadas y dirigidas por las
leyes que aunque son ingeniadas y construidas por el humano mismo, parecen funcionar
bien para mantener el correcto orden de las cosas.