RO SA R I O PA S C U A L L I R A

Fluctuando
entre
Tierra y Cielo
 Prólogo
Tenéis en vuestras manos el octavo libro que ha publicado
Doña Rosario Pascual Lira -nuestra paisana por derecho­
bajo el título de FLUCTUANDO ENTRE TIERRA Y CIELO.
Cuando Doña Rosario me sugirió la posibilidad de prolo­
garlo me sentí como aturdido, pues una cosa es presentar a
una persona, y otra muy distinta es prologar un libro.
Es muy fácil piropear o cumplimentar a los seres queridos
apenas que emplees el corazón y la anécdota. Pero hacer algo
parecido con un trabajo literario requiere unos conocimientos
mucho más técnicos, de los que yo, sinceramente, carezco.
Sólo por el profundo respeto que me merece he accedido gus­
toso a aceptar el reto aun a riesgo de fracasar en el intento.
En "FLUCTUANDO ENTRE TIERRA Y CIELO", Doña
Rosario intercala poemas de su primer libro "Apendicitis de
Doña Petra" con otros de máxima actualidad. El que dedica a
sus hijos y nietos es fiel espejo de la madre que, una vez
jubilada, se lamenta de las caricias que pudo haber dado y no
dio a sus hijos.
En el bosquejo a sus cuatro hijas vemos cómo sabe utili­
zar sus dotes poéticas para componer un retrato a cada una,
lleno de simpatía y entusiasmo, diciendo muchas cosas en
pocas palabras.
 En la "Azucena sevillana" -que me cautivó desde su pri­
mera publicación- conjuga divinamente el misticismo con lo
romántico.
De los poemas estrenados en este libro se me ha quedado
muy grabado " A la fuente de mi puerta", que refleja los sen­
timiento de la joven enamorada que, platónicamente, flirtea
con los chorros de aguas celestes.
El hecho de que Doña Rosario haya nacido en Osuna,
entre historia de Girones y poemas de Rodríguez Marín, y
luego haberse asentado en Paradas, entre mitológicas leyendas
de Lucida y versos de los poetas Núñez y Pérez Barrera,
posiblemente haya influido en su extraordinaria sensibilidad
originando el crisol donde se fraguaron el talante y el alma de
nuestra poetisa.
Su obra es intensa y extensa al mismo tiempo. Con los
versos de este libro reza al Dios de los cristianos, ama a sus
amistades, se rebela contra las injusticias, admira a los héro­
es... y reclama un altar para el llorado padre Barea.
Cada página de este libro, cada estrofa, cada verso, estoy
seguro que os embelesará y os transportará a otras galaxias en
donde reinan el amor y la paz.
"FLUCTUANDO ENTRE CIELO Y TIERRA" es una
nueva alegría literaria y espiritual para el pueblo de Paradas.
FELICIDADES, Doña Rosario, muchas gracias y un beso
muy fuerte.

Ricardo Benjumea-Cansino
Navidad 96
 PENSAMIENTOS

A pensares altos...
rompen escaleras
Pensamientos bajos.

Por trono y poder...

molinos de conjuros
no cesan de moler.

El hombre envidioso ...

siempre pobre,
sin paz y bilioso.

Rosario Pascual Lira

LEY DE VIDA Y AMOR

Ley de vida es libertad

del hombre sobre la tierra.
Y ley divina es amar
para que el mundo se adorne
de justicia y hermandad.

¡Vayamos adelante
nadie se quede atrás
que nunca desfallezca
la fe por la unidad!

¡Cogidos de la mano
domado el pensamiento
a cada cual lo suyo
y el mundo será nuestro!
 A MIS HIJOS, NIETOS Y BISNIETOS
-SUMAN ENTRE TODOS CUARENTA Y TRES­
LES RECUERDO APRECIEN EL SONETO
QUE DE ESTA ESTROFA BESA HOY LOS PIES.

Hijos míos: En las páginas que escribo,

un gran trozo de mi alma hoy os dejo.
Si al leerlas vislumbráis de mí un reflejo,
a Dios gracias con vosotros aún convivo.

Sólo un ruego: Vuestros pechos sean archivo

de esta obra de cariño y de consejo.
Si la honráis como merece, será espejo
cuyos mágicos destellos yo percibo.

Sea mi rima florecilla y blandos rezos

que os acerque el Gran Señor, de amores, prieta.
¡Ya de gozo y esperanzas, mi alma.. llora!

Cada letra y cada estrofa sean los besos

que no os diera en mi vida tan inquieta.
¡Recibidlos cada día y cada hora!
 BOSQUEJO DE MIS CUATRO HIJAS
EN FEBRERO DEL 63

¡Muy guapa es Paquita! ¡Es flor candorosa,

de ojos melados y cutis trigueño;
muy noble y cristiana, mas... no tiene dueño
por ser delicada y muy quisquillosa!

La sigue Rosario. ¡Llamémosle rosa,

rosal de ilusiones, de cantos y ensueños!
Gentil y graciosa, venció a un paradeño
y ya es madrecita y modelo de esposa.

Juncal y morena ... ¡mi esbelta Leonor:

exótica flor con ojos de mora;
anida ilusiones y espera al amor!
Da fin la pequeña: De rubio color,
picante y traviesa... ¡por todo me llora
y cuenta las horas por verse mayor!
 A MI HIJO ANTONIO

Trazo, hijo, cada día un rompecabeza

cavilando qué pondré en cada casilla,
para hincarle a la Quiniela la "puntilla"
y ganarme los catorce... ¡Qué lindeza!

¡Mas, no vale quebrantarme la cabeza

me la juega, ¡y de puño!, el Sevilla,
que se deja colocar la zancadilla
cada vez que pronostico su proeza!

Cuando el Betis, por sorpresa, bien me toca

y el Madrid, Elche y Bilbao mi juego cantan,
están Córdoba y Las Palmas .. ¡como roca!

El Valencia y el Osasuna me traen loca:

cuando pienso darles caza, se me espantan ...
y, así... ¡toda perspicacia sabe a poca!
 TRAS LA FORTUNA

A la suerte persigo afanosa

tras la Once, la Loto y la Quiniela;
mas, por montes lunarios canta y riela
esta hada voluble y caprichosa.
Con mi traza -sin tino y poca cosa-,
alcanzar quiero un pleno. ¡Vaya tela!
¡Y las noches me paso a dormivela
repartiendo esa suerte tan morosa!

Mi Miguel, ¡levantaría su empresa;

mi Paco, a Sevilla se vendría ...
¡Hondo anhelo que anido en mi cabeza!

A los demás... su parte entregaría,

y, aunque digan que peco de simpleza...
mi parte, ¡a causa justa cedería!
 A TI, MATRONA

Trabajaste, matrona, noche y día

recogiendo, paciente, bellas flores
que, entre gritos, quejidos y dolores,
el rosal de la vida te ofrecía.

No pudiste gozar de la alegría

que la vida ofrece en mil colores,
y, hasta el mismo Morfeo -¡Ya no llores!-,
de tus ansias de sueño se reía.

¡Del rigor del invierno fuiste helada;

del fulgor del verano fuiste fuego;
te adornaste de escarcha y de rocío!

Y tus manos -de seda sonrosada­

cubrieron con amor a un mundo ciego
que ignoró, siempre ciego, tu hambre y frío!
 A TI, MUJER ABORTISTA

¡Oh mujer, reaviva tu conciencia

y abraza ese ser que has concebido!
¡No le niegues amor muy merecido
de una madre que es vida y providencia!

¡Piensa en ti, ¡oh mujer!, en consecuencia

si tu madre se hubiese desprendido
de tu feto-vital... no habrías nacido
y gozado el vivir de tu existencia!

¡Acógelo en tu seno milagroso,

que milagro es la vida y la muerte
por la gracia del TODOPODEROSO!

¡Sueña, canta: ¿Será un niño precioso?

¿Será acaso una niña de tal suerte
que, cual yo, siempre vida? ¡Canto hermoso!

Quien dictase tal ley devastadora ...

¡no es buen hijo, ni buen padre! El cielo, llora!
 ¡AY, JUVENTUD

¡Ay juventud que blasonas

de belleza y poderío!
Sin remedio irás al río
que a todos nos desmorona!

¡No se ufane tu persona

de su don y estado regio,
pues, por mucho privilegio
que le ·depare la suerte,
ha de rendir a la muerte
toda gloria y sortilegio!

¡Mis manos, huesudas;

mi piel, arrugada;
la luz de mis ojos,
en cuencas profundas
por siempre ahogadas!

¡No pavonees, niña hermosa,

de tu flor de juventud!
También fui lozana rosa
como hoy lo eres tú.

Al final... ¡poquita cosa!:

bichito de media luz
¡soñando ser mariposa!
 UN VALIOSO AMIGO

Fiel cronista, escritor y buen poeta

es mi amigo al que emular no atino.
Por la gracia de Dios y del destino,
de saberes su obra está repleta.

Es su nombre -un nombre que a otros reta­

don Ricardo Benjumea-Cansino.
Mi espíritu se encuentra ya cansino
de perseguir su vuelo de aloeta.

¡Cómo no!, ¡hoy nos honra la figura

de este prócer verbal que se dilata
dando vida a olvidados sueños!

¿Intentar imitarle? ¡Vano empeño

que a mi "boli" inquieta y tortura!
A su oro... ¡no alcanza mi hojalata!
A DON RICARDO BENJUMEA-CANSINO,
EN CONTESTACIÓN A UNO
DE SUS HERMOSOS POEMAS

Hoy, las cuerdas de mi lira,

-dormidas haces de años-
al arrullo de tus notas,
Ricardo, se despertaron.

Entre sus cuerdas reviven

hechos vividos, pasados,
y el trajinar de locura
de mis horas sin descanso.
¡Cuántas veces sol impío
me abrasaba con sus rayos
y a mi piel -de blanco armiño­
tomaba en escarabajo!
Días de lluvia y de frío,
mi cuerpo todo empapado,
más que corría.. ¡trotaba
como potro desbocado!
¡Cómo olvidar las riadas
en trombas -todo un ocaso­
por la calle de Las Huertas
de noches sin luz, sin zapatos ...
...o botas que protegieran
a mis pies muy delicados!
 ¡Cuántas madrugadas, cuántas...
el puente Birrete, alzado,
fue testigo de mi andanza
sobre su lomo y volando!
¡No me llevaron los vientos
porque, mi espíritu osado,
al guardia municipal
asía manos y brazos!
Manolito y otros más,
atentos me acompañaron
por calles y vericuetos
noches de lobos y espanto.
¡Cuántas noches me adentraba,
sin luz, en baches y barros
sin siquiera una cerilla
que orientara mis pasos!

Todo esto retrasaba

mi presencia a los reclamos
bien para aplicar calmantes,
bien para atender un parto
y, a veces, para consuelo ...
de algún alma agonizando,
donde tan sólo los cielos
eran dueños de un milagro!
 Por muchos, muchos dolores,
enfermedades y partos ...
aún siento en mis entrañas,
de angustias, ¡los ramalazos!
¡No importan noches oscuras
martirizando mis pasos,
ni veste y pan escasos
sufragando mi alta entrega!
¡Vida que así se doblega ...
doblegar puede su ocaso!

Quiero hallar mi sepultura

entre muros de Paradas.
¡En éllos están grabadas
mis glorias y desventuras!
 EN LOOR DE LA INTENSA NEVADA
DEL AÑO 1954 EN LA VILLA DE PARADAS
(SEVILLA)

¡Oh maná de belleza inmaculada,

al bruñír nuestros lares tu hermosura,
muy celosa Selene, en desventura,
eclipsó el fanal de su alborada!

¡Oh rocío del cielo; diosa hada

que, ataviada de celestial albura,
tu gracia misteriosa de luz pura,
nos reclama al cielo una mirada!

¡Hoy te canta mi enamorado pecho,

por aquella mañana que mis pies
macularon el nácar de tu manto!

Desmayo de alevillas! ¡Sacro lecho

que, a los besos de amante Sol, después
se hizo ofrenda de lágrimas y canto!

¡El niño vivía sus horas de encanto

rodando la nieve mil veces por tres,
y el árbol gemía aterido y maltrecho!
A LA MEMORIA DEL ILUSTRE ESCRITOR
Y HUMORISTA DON RAMÓN GÓMEZ
DE LA SERNA, CON MOTIVO
DEL HABERSE BAUTIZADO CON SU
NOMBRE UNA CALLE DE PARADAS

¡Hoy luce Paradas alegres crespones;

su fuente de plata se exhibe orgullosa;
elevan plegarias las almas piadosas,
de aquí a los confines de lejos rincones!

¡Allá en la altura entonan canciones;

florecen las mieses y el viento reposa:
arriba un poeta, de alas de rosas,
a lares ocultos de extrañas regiones!

¡Extraños viajes por nubes y cielos;

extraños caprichos; greguerías sin cuentos
ansias incumplidas de intensas ternuras!

Hoy, la caravana de tantos anhelos,

se eleva triunfal y, recitan los vientos,
del gran ramonismo, ¡las bellas locuras!
A LA FUENTE DE MI PUERTA

¡Qué repreciosa es la fuente

que simboliza a mi pueblo!
Porque un Dios bueno lo quiso,
de vecinita la tengo.

Ella me da su frescura
y regala, al son del viento,
música que sólo entienden
ninfas purificadoras
y almas que se enamoran
de su voz y sentimientos.

A hurtadillas de la gente,
cuando susurra el silencio
y las estrellas me hablan
de historias que voy aprendiendo,
abandono mi balcón
-donde tras noches me siento­
y, en alas de mi ilusión,
a su regazo desciendo.

A pesar del oleaje

saltarino de sus miembros,
venciendo vagos pudores,
entre sus greñas me enredo.
 Yo le cuento mis pesares
en un mundo que no entiendo.
Ella me cuenta sus cuitas
y las dos nos comprendemos ...
Me dice que la maltratan
sin piedad, sin miramiento,
porque a comprender no alcanzan
que ella albergue sentimientos ...

¡Mirad si es noble mi fuente

y sabe guardar secretos,
que, ni a mí, que soy su amante,
me cuenta líos ajenos;
siendo, tras horas, testigo
de lo malo y de lo bueno!

¡Somos dos almas gemelas

en sentires y anhelos,
y entre beso nos fundimos
en dulce-fuerte aleteo!

De pensamientos muy tristes ...

¡nos brotan rosas y besos!...
 ...¡Qué preciosa está mi fuente
con sus bracitos abiertos
y el diapasón de sus greñas
donde enredada me quedo!

Entre el azul de sus aguas

y el azul claro del cielo,
velado por las estrellas
nuestro romance está preso.
Ella ¡canta, llora, ríe, sueña,
y sabe que todo es sueño!

A eso de la media noche

-después de amante flirteo­
mi amada fuente se duerme,
y yo, soñando, ¡me acuesto!
A LA PLAZA DEL VIEJO MERCADO
DE ABASTO DE PARADAS

¡Vieja plaza de mariscos y verduras;

de pregones en concierto discordante,
el hechizo de un anhelo, en un instante,
te hizo nido de colores y hermosura!

¡Un oasis de fragancia y de frescura

es la brisa de tu fuente exuberante,
que refunde en la magia de su cante
el besar de tu floresta de luz pura!

¡Si hasta el marco de tu cielo canta y ríe

y te ofrece dorados tiernos besos
que entretejen con tus flores mil celajes!
¡A tu eterna primavera, que sonríe,
hoy le brindo mi canción cual sendos rezos
porque eres juventud, luz y encaje!
 A LA SANTA MEMORIA DE DON RAFAEL
BAREA Y DÍAZ, PÁRROCO QUE FUE
DE LA IGLESIA DE ESTA VILLA DE
PARADAS (SEVILLA). FUE EJEMPLO
DE SACRIFICIO Y AMOR EN BIEN DE LOS
NECESITADOS. POR ELLOS VIVIÓ Y MURIÓ
EN LA MAYOR INDIGENCIA

¡Santo padre Barea, ardiente llama

de un amor entregado al sufrimiento,
tu pueblo paradeño, ni un momento
olvidóse de ti, y hoy te aclama!

¡Tu célico perfume se derrama

sobre almas bruñidas de tu gento,
y, el aura de tu gracia, presta aliento
a la herida que ayuda te reclama!

Tu mirada: ¡Fiel reflejo de mensajes de amor!

Tus manos: ¡Dos abanicos al hambre aireando!
Tus pies: ¡Peregrinos descalzos y trillando

piedras del pueblo en pos del dolor!

¡Mensajera paloma, izaste vuelo,
desplumt'y radiante, hacia tu Cielo!
 VOZ DEL PUEBLO PARADEÑO EN HONOR
DEL PADRE DON RAFAEL BAREA Y DÍAZ

¡Yo reclamo un altar y monumento

a tu excelsa figura, santo padre,
por toda tu tristeza ante el desmadre,
por toda tu alta entrega al sufrimiento!

¡Por tu sotana rota en detrimento

del llanto por el pan de cada madre;
por tus pasos gloriosos: sacro hojaldre
para ofrenda de fe y de alimento!

¡No basta abrigarte en la memoria

del pueblo paradeño que te ama,
que te lleva en las andas de su pecho!

¡Tú tienes, santo padre, fiel derecho

a ese trono y altar que hoy reclama
una página en blanco de la Historia!
 LA AZUCENA SEVILLANA

Poema escrito en 1973 en honor de

la maestra teresiana Victoria Díez.
Ha sido beatificada por Juan Pablo
11 el JO de octubre de 1993

Forjado por nueva lunas,

hecho de besos y entrañas,
velado por las estrellas
y florecillas por llantas,
un "tilburi" desfiló
por el puente de Triana;
atrás el río se deja
para internarse en la Alfalfa.

Mil sones -sin movimiento­

le ofrecen sabias campanas.
Celoso, el Guadalquivir
para el curso de sus aguas;
lloran peces a la orilla;
embisten barcos y lanchas...

Sin jueces y sin testigos,

entre el río y la Giralda
dicen que hubo querella
por los besos de una santa.
 Fue en otoño o primavera
-el tiempo no importa nada­
el "tilburi" floreció
en flores de carnes blancas.

Querubes y serafines
en gasas de nubes bajan
y un aderezo le ofrecen
confeccionado de gracia.
¡Flores de amor y martirio
prenden en su frente alba!
¡Sellada quedó con sangre
una aventura tan alta!

¡Fue delicia de sus padres,

alegría de la Casa,
y, en las manos del Maestro,
pura miel y cera blanda!

¡Piedra de raros destellos,

pétalo de flores raras,
músculo duro al pecado,
forjado por dura fragua!
 La Luna dióle el azogue
para mirarse en su alma,
la Giralda le enseñó
fortalezas de su raza,
y, en alas de amor y fe,
su virgen vida ofrendó
por su Cielo y por su patria.
¡Vida gloriosa encontró
la azucena sevillana!

¿Dónde está? ¿Quién la mató?

Cuenta una sierra -callada-,
que perderse un cuerpo vio
y elevarse un alma blanca.
¡Qué importa quién fue o no fue...
eso ya no importa nada,
si aquí derramó su sangre
para saciar alimañas,
¡un cielo entero se abrió
para dar paso a la santa!

Canta la fauna del río,

su curso siguen las aguas,
y, hay quien ve...
¡cómo se besan, ¡Dios mío!,
el río y la Giralda!
 A LA MEMORIA DE JUAN XXIII

Exsaltando su virtud, restar no quiero

luz y gracia a los demás antecesores.
Creo que canto al mejor de los mejores
y, entre aquellos elegidos... ¡al primero!
¡De palacios a chabolas fue viajero
que, abrazando todas razas y colores,
ofrecía el gran perfume de su flores
por la ansiada redención del mundo entero.

¡Ya su boca no nos habla sonriente;

su mirada no nos baña enternecida,
ni sus manos nos bendicen nuevamente!

¡Ya su alma sólo a Dios se encuentra asida,

mas, nos deja, desde Oriente hasta Occidente,
la fructífera simienza de su vida!
 A NUESTRO PAPA PABLO VI

Al volar a otro lar su antecesor,

sin perfume las flores se quedaron;
condolidas, las almas le lloraron
fusionadas en ayes y dolor.

¡Aleluya, Señor, Señor, Señor:

nuevo papa los cielos proclamaron;
su perfume las flores recobraron
y las almas lloraron, ¡ay, de amor!

Alegre de ilusiones y esperanza,

unísono la voz y sentimiento,
¡viva el papa!, clamó el mundo entero.

Que, su barca de fe y amor sincero,

bogue siempre por mares de bonanza
elevando, del mundo, el pensamiento.
 LLEGASTE, NAVIDAD

¡Llegaste, Navidad, con albo canto

de mensaje de amor y de bonanza!
¡Llegaste, Navidad, con alba lanza
segadora de males y de llanto!
Si tras siglos la blonda de tu manto
dio cobijo al desnudo, aún no alcanza
ver, siquiera, un repliegue de esperanza
y en vano se desangra el Hombre Santo!

¡Y te canta y festeja el mundo entero

entre hermosos belenes y entre flores,
entre rezos, campanas y panderos!
¡Pero siguen llorando los luceros,
los vientos se retuercen de dolores:
nuevamente se inmola el Gran Cordero!
 ¡OH MADRE LLUVIA!

Agua clara, transparente

más que un valioso diamante!
¡Madre Vida, cuna y cante
de antigua nana ferviente!
¡Madre Agua, fría y caliente
eres ofrenda de amor;
no nos niegues, ¡ay dolor!,
de tus pechos la ambrosía;
la Humanidad moriría
sin tu frescura y calor!

¡Un clima desolador

sin tu presencia amenaza,
es nuestra fe y esperanza
tu milagro bienhechor!

¡Todo cambia de color:

la tierra se resquebraja;
las mieses se tornan paja ...
y el alma, estremecida,
te ruega, fuente de Vida,
de tu sangre... ¡una migaja!

¡Agua clara, transparente,

no nos niegues, madre Vida,
beber de tu sacra fuente!
 VASO DE AMOR

Anoche me dijiste que, el amor

es cual vaso de agua rebosante.
Si colmado se tiene en todo instante,
es fuente de ilusión y buen sabor;

si queda el cristal seco, ¡ay dolor!,

esa sed que sintiera el pecho amante,
buscaría por ruta muy distante,
-aun en vaso de hiel- agua o licor.

Amor es huracán, fuego, locura...

mas... ¡del roble es también la débil rama
que puede desprenderse de la altura!

¡Encuentre eterna fuente de agua pura

ese amor que a tu pecho, amigo, llama
coronado de ensueños y ventura.
 ¿A DÓNDE IRÉ?

Carne, sangre y hueso sé que soy,

pero sé que además seré otra cosa...
Ser tan sólo materia luctuosa
negaríame el fin tras del que voy.

Esencias de mi ser anhelan hoy

aromas y candores de la rosa,
que liberen cavar mi propia fosa
si en carne, sangre y hueso siempre estoy.

¡Hemisferios dispares, ¡ay!, dominan

ambrosías que halagan y atormentan
mis viejas ansias de beber del cielo!

Y se clavan mis pies al frío suelo,

donde horrores y mendades se aposentan,
do al Averno los pasos se encaminan!
A MI ENTRAÑABLE AMIGO Y ADMIRADO
PROFESOR DON ANTONIO LEÓN ROMÁN.
OCTUBRE DE 1991

A ti, amigo León, de garras mansas,

te quedo tiernamente agradecida
por líneas de tu zarpa esclarecida
que irradió nueva luz a mi esperanza.

Merecer tanto honor... ¡por Dios, no alcanza

esta pobre paloma alicaída
que, a las cañas del suelo siempre asida...
aletea soñando lontananzas ...!

¡Gracias mil por las notas de frescura

que prendiste en las plumas de mi alma
soñadoras de vuelos de otra altura!

¡Ay de mi, imposible esa ventura

de silencios de rezos y de calma
do se duerman mis ansias de locura!
 SÓLO TRAS LA MUERTE

¡Sólo allí, más allá de las estrellas,

sólo allí, más allá del pensamiento,
más allá del humano entendimiento
persiguiendo una paz que no destella ...

encontrarás final de una querella

que nos sume en mar de sufrimientos,
do se ahogan hermosos Mandamientos
conforme a una Voz sagrada y bella!

¡Sólo allí, tras la muerte has de encontrar

esa paz tan soñada en este infierno
destructor de armonía y hermandad!

¡Sólo allí, en la única Verdad

de ignorado camino sempiterno
de un sueño do aprender el buen amar!
 VIVIMOS Y MORIMOS BAÑADOS
DE ESPERANZAS

¡Señor, Señor, Señor, ¿hasta cuándo

sin amparo de mano justiciera
que prenda una flor de primavera
en las almas que al cielo están clamando?

¿Hasta cuándo han de estar, Señor, llorando

esclavos de una mafia traicionera
que cocea y muerde más que fiera
y de sangre se está alimentando?

¡Pobre mundo tras paz que en vano alcanza

y vive -más que muerto- su agonía
soñando una utopía de bonanza!

¡Nacemos aureolados de acechanzas;

vivimos de esperanzas día a día
y morimos bañados de esperanzas!
 A UN AMIGO EL DÍA QUE SE
ORDENÓ DE SACERDOTE

¡Que los cielos repiquen con presteza

y los suelos retiemblen de ventura!
¡Que los pechos se abran de dulzura
y Satanás reviente de fiereza!:

¡Un pajarillo audaz, en su agudeza,

bordándose de sol la vestidura,
se iza de este estanque de agua impura
vislumbrando otros lares de grandeza!

¡Que tus alas no sufran detrimento

en el ávido vuelo que te asumas
por los aires de un mundo turbulento!

¡Has de ser piedra y pan; gozo y tormento,

y, aterido, has de dar todas tus plumas!
¡El Señor esté en ti cada momento!
"YO NO SÉ CÓMO DIOS NO SALTA UN DÍA

"Yo no sé cómo Dios no salta un día"

-Montesinos nos dice en un soneto-
y Dios salta ante un mundo incompleto
que acelera su angustia y agonía.

¡Un mundo fementido, en su osadía,

a Dios lanza el más endino reto!
Y Dios sigue esperando -de amor, prieto­
que se arroje a las aguas de su ría!

¡A esas aguas de gracia redentora

que, lavando asperezas de un sendero,
nos conducen a paz conciliadora!

¡A esa paz do el amor cual flor se aflora

y, aromando un "te amo y un te quiero",
el hombre se enaltece y enamora!
 SAN JUAN DE LA CRUZ

La vida es un don de la naturaleza,

pero una vida noble y hermosa
es el presente de la sabiduría.
Anónimo

"Caballero andante a lo divino"

que a lo divino vive y morir quiere
también a lo divino. ¡Sangra y muere
persiguiendo una Luz que es su destino!

¡Un reguero de sangre es el camino

que le alienta un Amor que, amando, hiere
y, a más gotas de sangre que ofreciere,
más crisoles de gozo le convino!

¡Sabiamente de Dios enamorado,

a música le sabe el pensamiento
de saberse con El a todas horas!
¡El le llama, le invita, le enamora,
y, aunque sabe que amarle es sufrimiento,
gozoso es su sufrir esperanzado!
 FUE UN MILAGRO

Fue un milagro, ¡sí, un milagro!

¡No fue un sueño-ficción
ni vocingleras comadres
dieron vida a una invención!

Fue un milagro, ¡sí, un milagro!,

testimonio y fe nos dio
el eréctil bisturí
que al acecho se quedó:

Madre de cinco chiquillos,

el esposo, enfermó,
y a ella le diagnostican
en el hígado un tumor.

Dos meses el pequeñín,

diez añitos la mayor,
y los doctores confirman
que es grave la operación.

¡Si el gran vuelo de sus pies

(patitas de perdigón)
era del triste septeto
sementera, sol y amor!
 En la noche que precede
al día de intervención,
llora y reza, ¡no por ella!,
y musita a media voz:

¡Déjame vivir, María,

Dulce Madre del Señor,
que, con mi sangre, un contrato
a cambio te firmo yo!:

¡Sacrificio, hiel, trabajo;

para mi gozo... dolor;
para mi lecho... ortigas;
para recreo ... tu amor!

¡Que siempre veinte cuchillos

me estén hiriendo a traición,
y que obstruyas tus oídos
se me escapa un clamor!

¡Pero déjame vivir

sin curas ni operación,
recursos, ¡ay!, para ellos
no dejo en esta ocasión!
 ¡Silencio clama la noche
con la mueca de su voz!
¡Músculo, para y reposa,
no profanes mi mansión!

¡Deja que el alma se eleve

hoy libre de tu aguijón;
déjala que suba, suba...
a lares de redención!

Velas de llanto se encienden

en la cúpula mayor:
lloran luceros y estrellas
al hipar de una oración!

Ignorada melodía
busca en el alma extensión
y en alas del viento canta
misterioso trovador.

La noche volvióse aurora

en la oscura habitación;
lleno de encanto y misterio
marca las tres un reloj:
 Puerta invisible se abre
dando a un sin fin corredor,
y entre nubes se refleja
una hermosa aparición.
"Despierta, que estás curada!"
sin palabras se escuchó.
Dos horas de dulce sueño...
¡para el milagro bastó!
Su faz de plomo fundido,
en vivas rosas trocó,
y el farolón de su muerte,
como un soplo se apagó.
¡Fue el milagro tan real,
que, al narrarlo, la emoción
pone trabas a mi lengua
y fuego a mi corazón!
 Ella es como cualquiera,
como tú y como yo,
con faltas más que virtudes,
así ella lo admitió;
porque tiene por sabido
-el tiempo le dio lección­
que, de mártires y santos...
la mitad de los que son.

Tiene al cielo por testigo

de que su fe la salvó,
y, en cosa de tanta altura...
¡ya no cabe apelación!
 UN RECUERDO AL OLVIDADO
SAN ISIDORO DE SEVILLA OBISPO,
MÁRTIR Y ARZOBISPO DE ZARAGOZA.
NACIÓ EN SEVILLA Y MURIÓ ASESINADO
EL AÑO 466.

¡Bajo el marco del cielo de Sevilla,

una rosa de gracia floreció!
Sabia y santa, a su pueblo ofreció
un aroma cristiano sin mancilla.

¡Pastor de voz que imana y maravilla,

rebaños sin fronteras consiguió!
Por su celo y entrega mereció
de Valerio heredar la sacra Silla.

¡Alma alada; de amor divino, presa,

el río Miño en sus brazos te dio amor
y supo la razón de tu tristeza!

Del hereje la indómita fiereza

-¡no tu muerte!- fue flor de tu dolor!
¡Oh fanal y crisol de fortaleza!
 A MI RECORDADO PROFESOR
DON NICANOR MORILLO.
A MIS DOCE AÑOS ME PREPARÓ
PARA INGRESAR EN EL INSTITUTO
RODRÍGUEZ MARÍN DE OSUNA

Releyendo unas líneas, profe sor,

mar de llantos mis ojos anegaron:
Recuerdos en mi pecho despertaron
de rabietas, de cantos y de amor.

¡Rememoro, henchida de fervor,

las horas que en su lar prestas pasaron;
las flores que a mi infancia perfumaron
y el desvelo de usted, don Nicanor!

¡Hoy prendo,a ese homenaje que os ofrecen

los que abrieron su cáliz mañanero
al calor de su aliento y áureos rezos,

antiguas malvalocas que florecen

evocando afecto verdadero
y mi torpe rimar en albos besos!
A MANOLO NAVARRO, POETA EXTREMEÑO Y
SEVILLANO AGRADECIDA POR EL BONITO
SONETO QUE ME HA
DEDICADO EN LA REVISTA "ALDEA"

Tu soneto rasgaron de mi lira

las cuerdas oxidadas de mis años.
A su nuevo vibrar, sentir extraño
inundó mi espíritu de onira.

¡Hoy me honra esa hermosa humana mira

de verte en el taller que tanto entraño,
bordando con amor un magno paño
que da abrigo a mi apellido Lira!

¡Te inspiraste en la faz de las estrellas

que, captando la magia de tu cante...
hoy te invitan a convivir en ellas!

¡Gracias mil, es bien poco! ¡No es bastante!:

Aromaste de amor antiguas huellas
de esta fiel compañera en todo instante!
 A LA MEMORIA DE
DON ENRIQUE MONTOYA,
ARTÍFICE Y RENOVADOR
DE LA CANCIÓN POPULAR ESPAÑOLA

¡Utrerano de sal y sol de España

que, alentado de sueño singular,
peregrino se hizo de ultramar
por los lirios cautivos en su entraña!

Nuevo viento no azota ni empaña

el cristal de una fe que ha de velar:
¡A su España volver para ofrendar
milagros de su arte y magia extraña!

Guitarra de alto vuelo entre sus manos

despertaron, ¡ay!, notas que, dormidas,
se hallaban en sopor ya nada sano!

¡Orgullo de su pueblo sevillano;

honra y gloria de España, enardecida;
de sus hijos ... ¡amor muy soberano!
 A UN VINO

Hace tiempo que vengo cavilando

en fraguarle un soneto a cierto vino
que en mi santo me trajo mi sobrino
y al que estoy aún paladeando.

¡Vida mía! ¡Qué fuerza me iba dando

cuando entraba en mi cuerpo el muy ladino!
¡Y cómo mi cabeza perdía tino
al ver que la botella iba bajando!

¡Quien bien lo paladee, sin duda alguna

gozará de una nueva fortaleza
troncando su nostalgia en alegría!
Jerez de la Frontera fue su cuna;
su marca -de las marcas, realeza­
es "Tío Pepe" de González Byass.
A MI EXIMIO PAISANO, EL "BACHILLER"
DON FRANCISCO RODRÍGUEZ MARÍN.
1855 A 1943

¡Qué importa si tu cuna fue mi cuna,

insigne escritor de mi patrio suelo!
Si al nacer nos besó un mismo cielo,
no así, ¡ay!, besóme tu fortuna.

Añorando tu sombra cual ninguna,

tras tu senda se fue mi firme anhelo;
mas ... ¡pobre y alicaído ya mi vuelo,
tus huellas perdió, "Bachiller de Osuna"!

¡Fuiste noble, sencillo y fiel cristiano;

investigador y comentarista;
sal y flores brotaron de tus manos!

¡Hoy me honra llamarte mi paisano,

patriarca poeta, folklorista
y orgullo de mi pueblo sevillano!
 EL TORITO Y LA LUNA

Hoy las brujas de mi lira despertaron

y emigraron a otros lares, una a una,
al reclamo de un torito y de una luna
que en la noche misteriosa se encontraron.

Las patitas de oro y plata, se plantaron

y ahuyentáronse los astros, por fortuna.
Sin testigos, ¡cómo no!, sin duda alguna,
el torito y la lunita se besaron.

La lunita, coquetuela y altanera,

se engalana de faroles y.... ¡aquí estoy!:
guiña y ríe al torito que la espera.

Rebramando y tembloroso el toro-rey,

con la aurora de su amada por montera,
dice: ¡ay luna, ya por ti muriendo estoy!
AL DOCTOR DON GABRIEL SÁNCHEZ
DE LA CUESTA, AGRADECIDA
POR NO ADMITIR HONORARIO
ALGUNO POR SUS VISITAS
MÉDICAS PARTICULARES

Lamentábame, doctor, y con razón,

de mi escasa experiencia y poco tino:
dudaba entre enviarle cierto vino
o la sabrosa guitarra de un jamón.

De tal forma aumentó mi confusión

que, enterado don Alfonso, mi vecino,
dadivoso en mi ayuda presto vino:
conocía vuestros gustos y afición.

Hoy admiro, don Gabriel, la gracia pura

que del Padre habéis sabido merecer,
pues no cabe, a mi juicio, más ventura.

Don Alfonso pinceló con tal soltura...

que cual magia vi a este hórreo aparecer,
así, os mando mi soneto y la pintura.
 SONETILLO DEL DOCTOR
SÁNCHEZ DE LA CUESTA
CONTESTANDO A MI SONETO ANTERIOR

ROSARIO en cuentas rimadas,

PASCUAL -y no es cumplimiento­
LIRA que embellece al viento
de líneas versificadas.

Muchas gracias les sean dadas

(merecieran escarmiento)
con la gratitud que aliento
por lo que han hecho en Paradas:

A Alfonso Muñoz Repiso,

que admiré en Algarinejo;
a usted, que siguió el consejo.

de un consejero de viso.
Conste que el doctor no quiso...
¡Ahora soy yo el que me quejo!
CONTESTANDO AL SONETILLO
DEL DOCTOR

Ignoraba la existencia
del llamado sonetillo;
hoy la encuentro con el brillo
que le da su procedencia.

Domina artes y ciencia

vuestra pluma en cabestrillo,
siendo el dorado pestillo
que a luz da su inteligencia.
Su gentileza me abruma;
su finura y su manera ...
¡No es una gracia cualquiera

la gracia de vuestra pluma!:

Dio a mi nombre, en gracia suma...
¡la gracia que nadie diera!
 BUSCANDO LA SALUD

Buscando la salud que se me hurtaba,

a Sánchez de la Cuesta llegué un día.
Me dijo que gran cosa no tenía
y, además, que su haber no me cobraba.
Como fama de sabio él gozaba,
en la nueva visita que le hacía,
alusión quise hacer a su valía ...
y el sabio contestó, que, él, rebuznaba ...
A este hombre de ciencia, poco entiendo;
pero sí me hace ver al ignorante
que tras la falsa fama va corriendo.
Recobrar la salud ya estoy sintiendo,
pues, si tanto aprendí en un instante...
¡cuánto más aprendiera al seguir yendo!
SOLICITANDO UNA NUEVA CONSULTA

A su puerta, Doctor, de nuevo llama

quien debió más a tiempo haber llamado:
Un extraño "vecino", en el costado
me hace escaramuzas y algo trama.

Me molesta en activo y en la cama;

me recorre "la base y el tejado";
por delante, detrás, ¡me tiene ahogado
y busco un "policía" de alta fama!

Aunque a otro reinado sé que voy...

aún no quiero gozar esa experiencia
y caza sin cuartel al "bicho" doy.

Aunque muerto de miedo, vivo estoy

para oír de sus labios la sentencia.
¡O dais muerte al "intruso" o muerto soy!
 SOLICITANDO UN TRASPLANTE
DE CORAZÓN

¡Perdonadme, doctor, que, perdonar

es nobleza y ciencia muy gigante!:
Vuestra valla sagrada y de diamante,
a costa de estrellarme, osé saltar.

Con ropas de ladrón vengo a rogar

que acalléis vuestro fuero en este instante
y me hagáis -sin litigio- buen trasplante,
¡pues me siento el tedéum de agonizar!

Si sostén es el débil del más fuerte,

si se arrancan vivientes corazones ...
¡qué más da si uno muerto utilizáis!

Mas, si al darme esa vida, vos pecáis ...

¡defended vuestras santas posesiones
y dejadme en el treno de mi fuerte!

final... ¡no nos cabe gloria y suerte cual

hallar vida eterna tras la muerte!
 EN EL ÓBITO DE MI BUEN AMIGO
Y DOCTOR DON GABRIEL SÁNCHEZ
DE LA CUESTA

A un reclamo del viento de este estío,

como un silbo suave, mansamente,
te llevó de nosotros la corriente
de un eterno y misterioso río.

¡El alma se lacera, amigo mío,

y llora su orfandad por el ausente!
Quien por tu ausencia, aflicción no siente,
¡más muerto está que tu cadáver frío!

De sapiencia y bondad te coronaste,

y ofrendaste a los tuyos la semilla
de los sabrosos frutos que sembraste.

¡Y dime que no has muerto l ¡Que te izaste

a unos lares de paz y sin mancilla
que aquí, en tu Sevilla, bien ganaste!
 A LA ROSA

LA REINA SANTA

Isabel, hija de Pedro III rey de Aragón, y

esposa de Dionisio "El Liberal" de Portugal.
La llamaron "La reina santa" por sus virtudes
y amor para con los necesitados. En ella se
realizó el milagro de convertirse en fragantes
rosas el dinero y pan que portaba entre los
pliegues de su manto para sus pobres en el
momento de ser interceptada por su esposo.
Fue canonizada por Clemente VI

¡Célica flor, fragante, esplendorosa,

que, nimbada de arco iris celestial,
no hay color como el tuyo; no lo hay igual,
ni hay aroma cual tu aroma, ¡bella rosa!

¡Dios te dio realeza misteriosa

y te hizo crisol de gracia tal...
que bien puedes librarnos de algún mal
como a santa Isabel: reina, flor y diosa!

¡Tus pétalos cubrieron pan y cobre

que la reina portaba en su regazo
para alivio del hambre de sus pobres!

¡Rosa, mística flor; de amor, renombre,

que, aromando de Isabel sus santos pasos,
en el cielo bordaste su albo nombre!
 A UN COMPAÑERO SANITARIO
NEGÁNDOME A SER
ATENDIDA EN MEDICINA NUCLEAR

Referente a mis azares,

amigo, te he de narrar:
Medicina Nuclear...
¡no me cató por sus lares!

Esas pruebas nucleares

mi humanidad no tolera,
. .
por s1 acaso me munera
buscando mi curación.
Veo contaminación
que nuestra muerte acelera...

Me dije de tal manera:

-como se decía antaño­
La pipita, con su daño,
vivir más años pudiera
que si remedio le diera.

Y, en ésto recavilando ...

de "Corea" me fui alejando
y, sin ministros ni rey,
acogíme a vieja Ley,
y aquí me tienes, ¡rimando!
 A dicha ciencia, ultrajando
no estaré, amigo fiel.
Si se embadurna de miel
para moscas ir cazando ...
por mí... ¡un chitacallando
si no me ha de freir!

No es de noble predecir
para a un mundo violentar,
y más... ¡si logra curar
sin exponer a morir!

Quizás te hagan reir

mis raras cavilaciones;
tengo, amigo, mis razones
para de "Corea" huir.

Entre mi ir y venir
por alfombras y collados ...
soy un ser desconfiado ...
¡Ay, tema de tanta chanza,
precisa un Sancho Panza
y un Quijote muy adiestrado!
 A MARÍA JOSÉ MORENO

He releído tu libro
"JIRONES DE MI ALMA"
¡Un grito desesperado
de alevilla maltratada!

¡Alma de un cuerpo desnudo

y de risas solitaria,
que al viento lanza las notas
sangrantes de sus entrañas!

¡Quebradas lamentaciones
en cada verso desgrana,
y en cada estrofa florecen
desdichas insospechadas!

Tañido resquebrajado
de fisurada campana;
rosario de cuentas negras
por Satanás enlazadas!

¿Cuántos jirones le fueron

arrancados de su alma?
¡Jirones que dieron vida
a una arraigada llama
de voluntades de hierro
por el dolor reforzadas!
 Al cielo clama la luz
que siempre le fue negada,
y nueva ruta a seguir
en sus futuras pisadas.
Mas, ¿qué vereda encontrar
en tan agreste montaña?:
-laberinto de caminos
ocultos por la cizaña-

En su dolor sumergida,
le palpita una esperanza:
Por cada sangrante herida,
sueña fundir alba lanza,
alba lanza destructora
de dragones de dos caras;
asesinos de los cuerpos;
devoradores de almas!
 Sueña ofrecer las cenizas
de su cuerpo -incinerado­
para abonar su jardín,
donde cada primavera
emanen todas las flores
esencias de su sentir;
donde sus hijos pudieran
su presencia percibir,
y ella, entre sus hijos,
después de muerta, ¡vivir!
A ENFERMA PARALÍTICA
DEL HOSPITAL CLÍNICO

Dios la proteja, Bernarda,

y a todos los pacientes
de esa Casa Hospitalaria.
Decidme, ¿habéis progresado
en la tabla de gimnasia?
¿o seguís con la canción
de rigideces tan falsas?

Si albergáis eterno miedo ...

¡jamás sanaréis, Bernarda!
Lo que vuestra fe no alcance,
la medicina no alcanza.

Pasito a paso, mis niños

a pocos meses ya andaban:
Ya se asían a una silla,
ya a la pared encalada,
do, su abanico de dedos,
primicias artes bordaba.

A veces, sus tiernos pies

y sus manitas de hada,
el equilibrio rompían
y por el suelo rodaban ...
 Pero, cual todos los niños,
si cien golpetazos daban,
más prestos, ¡con amor propio,
del suelo se levantaban!

Y así se hicieron hombres

cual todos los de su raza:
con voluntades de hierro
en subidas y bajadas ...

¡Los cobardes no merecen

del cielo una mirada!
¡Miedo, miedo, miedo ...!
Pero ¿qué es miedo, Bernarda?
¡Eche valor a esas piernas
y al suelo besen sus plantas!

¡Fármacos y complacencias
de todas las batas blancas,
si usted no triunfa en su empeño...
para sanarla no bastan!
 LÁGRIMAS DE UN MARINERO

Tus lágrimas rodaron por mis venas

llegando al corazón ya semirroto,
y, el sentir de un dolor -cercano e ignoto-,
se hizo flor anodina y de luz plena.

¡El sol hoy brilla más y, más serena,

mi tenebrosa mar amaína un poco:
Imprevisto barquero, ¡medio loco,
rema y canta para ahuyentar mi pena!

¡Mis males se han dormido al blando son

de esa voz marinera que le canta
-mientras llora- a mi enfermo corazón!

¡Oh dulce llanto que mi mal espanta

y en mi pecho alienta la ilusión
de que llora por mí, y eso, ¡me encanta!
 VI A UN POETA

Vi a un poeta llorando cierto día

al "abrir" su inocente corazón:
poseía ardiente inspiración,
mas, de letras... ¡el vate no sabía!

Versos muy candorosos componía

y, aunque vida albergaba su versión,
exenta de sintaxis la oración...
invertida la esencia le salía.

¡Hay poetas letrados que, con maña,

convierten la oración en agua impura
do,n_de un mundo inocente hoy se baña!

¡A veces hay dobleces y legañas

en ojos que te miran con dulzura,
y aura pura en ojos sin pestañas!
 AL PINTOR Y YUDOCA
CARLOS BARBER ALBORS

C-abalgando por pampas del ensueños,

A-nhelando una luz que casi llega...
R-etórica muy fiel a ti te riega:
L-eyenda hermosa es tu albo empeño,
0-sculos de un pincel que enciende el leño
S-egún de ilusión tu espíritu se anega.

E-andera de un yudoca que se pliega,

A-sciende, salta, reza y de él es dueño.
R-ey innato de un don que santifica,
B-razo gitano de esencias relleno.
E-spero para ti todo lo bueno:
R-egalo que a España dignifica.
A-nda, sueña, no dejes el camino
L-ejano y al alcance de tu mano.
B-esa tu fuente de licor tan sano:
0-bice de falacia y desatino.
R-egir, prevalecer, es tu destino,
S-igue adelante, ¡genial alcoyano!
 PRODUCTOS CONGELADOS

Hoy la gente se afana en congelar

producto alimenticio, día a día.
¡Zafia comodidad! ¡Vana manía
tener siempre el "frigo" a reventar!

Ignora esta gente singular...

que, alimentos de justa caloría,
congelados, reducen armonía
de valor nutritivo y paladar.

¡Un buen magro de carne congelada;

un buen pez frescamente congelado,
y fruta en el "frigo" conservada,

cada uno, su tiempo limitado

y libertad y hora señalada
para, sin detrimento, ¡ser catados!
 RECORDANDO AL POETA
MIGUEL HERNÁNDEZ

¡No estás muerto, Miguel; estás dormido:

La túnica de tierra mancillada
que vela tu floresta perfumada,
se estremece al vibrar de tu latido!

¡Soñaste: de una roca.... blando nido;

de un gruñido ... la flor de una balada;
de un ocaso... el fanal de una alborada,
y, del vacío... ¡tu alto contenido!

¡Ay dolor de aquel gran quebrantamiento

de tus mágicas alas de sirena
que aún nos brindan frescor de su aleteo!

¡Tú no has muerto, paloma; tú estás plena

de vivientes celajes del torneo!
Con nosotros están ¡tu voz y aliento!
 DIME, MIGUEL

Dime, Miguel, ¿por qué fuiste

cielo abierto en mar cerrado?
¿Por qué fuiste sentenciado
por el amor que sentiste?

¡En tu entraña retuviste

el clamor de entraña tierra;
clamor del alma que encierra
de otras almas los clamores
y afianza sus dolores
y en sus dolores se entierra!

¡Nuevos soles ofreciste,

nuevos lirios de colores,
y sembraste trigo y flores
en el lagar que naciste!

¡Bellos retoños no viste,

no viste tu ansiada luna
ni tus surcos de fortuna
que rastrillo y hoz cubrieron;
más... ¡tus genes florecieron
sobre el clavel de tu cuna!
 A ALFONSINA STORNI
(NOVIA DEL MAR)

Del albor de la mar te enamoraste

y del cielo no viste la hermosura.
En tu pecho, sediento de ternura,
castillitos de espuma fabricaste.

¡No hallando una rendija do asomarte

en tu cárcel de ensueños y tortura,
sólo viste, del mar, la inmensa albura,
y en sus brazos de luna te arrojaste!

Tu mirada prendiste al ancho cielo

en tu último adiós. ¡Estremecidas,
refulgentes estrellas descendieron!:

¡Constelación de luz, ¡ay!, que no vieron

tus ojos de esperanzas ya dormidas
entre sábanas blancas de tu anhelo!
 A ALFONSINA

¡Fuiste águila, y, en tu postrer vuelo,

ansiaste un nuevo mundo de hermosura!
Al no hallarlo, ¡de rabia y amargura,
tus alones doblaste y caíste al suelo!

¡Soñaste: de oleaje, blanco velo;

de perla y plata-mar, la vestidura;
y hallaste, en Mar del Plata, la ventura
de un tálamo nupcial para tu anhelo!

¿Cómo a Dios, Alfonsina, tú enojaste

si cual mar fue la albura de tu pecho
y la inmensa ternura que encerraste?

A las puertas del Cielo tú llamaste,

pero, sorda en la bruma del despecho...
¡la respuesta divina no escuchaste!
MIS FALTAS ORTOGRÁFICAS

Mi inicio en la escritura,
me inicia formular
determinados inicios
que me inicio en presentar:

Las reglas gramaticales,

-que me esfuerzo en respetar­
todas no suenan acordes
a la esencia del cantar.

Por ejemplo: presentemos

la palabra "horfandad".
¡Ya la abrigué con la hache!
¡No lo he podido evitar!

Cada vez que este vocablo

en papel he de plasmar,
la hache se antepone
y ocupa primer lugar...
Extrañada, me pregunto
ante tal fatalidad:
¡Que mágica fuerza me arrastra
a reincidir más y más ...?
 ¿Por qué este vano empeño
por tal letra entronizar
en morada que no es suya
y enfrentando a las demás?

Además, cubre un espacio

cuando el papel vale más,
y, a la máquina, la hache
se le desgasta al pulsar...

Pero, esa tácita fuerza

-que no me es dado explicar­
se hace dueña de mis dedos
cuando escribo orfandad.

¡Y me invade un arrullo
de amor, casi maternal,
cuando antepongo la hache
a las ocho letras más!

Se encuentra desamparada,
frágil en su integridad ...
¡ternura y calor reclama
la desvalida orfandad!
 La hache no vale nada
en la ley gramatical...
¡y cuánto valor tendría
amparando esa orfandad!
En vez de ocho letras... nueve ...
¡La Academia lo dirá!

En mi escritura, otra falta

deseo justificar ...
La sitúo muy consciente
por verla muy natural.

Es la Real Academia
la que debiera cambiar
ciertas eses por la equis,
y en ello debe pensar.

A "explendor" le aplico equis,

porque así le suelo dar
existencial extensión
y más luminosidad.

¿Por qué, a tan bello anhelo,

de falta se ha de tachar?
 A la equis doy cabida
en otro justo lugar.
Que las eses me perdonen
este afán de suplantar:
A "extremecer"; la equis
¡mirad lo bien que le va!

Expresión resta la ese

a este choque emocional;
por su excelencia, la equis
se la hace acrecentar,

A estremecido, la equis
es lo suyo y racional.

Así, que doctos señores,

mi tesis considerad ...
Al César lo que es del César,
y a equis y hache... ¡su heredad!
Mas, según tengo entendido,
la sentencia, echada está:
¡"Cada letra... "pa" su casa"!.
académicos dirán;
pues, la Real Academia ...
¡sesudos no admitirá!
 ¡OH ESPAÑA!

¡Oh España, mi patria, mi tierra,

la savia que dio vida a mis mayores,
la esencia que aromó de luz y flores
una existencia que la olvida y yerra!

¡Alfarera dorada de alfa tierra

ataviada de entregas y sudores;
la que altiva nos brinda los honores
del altar que en su entraña fiel encierra!

¡No doblegues tu ínclita bandera

ante viento impío que te azota
intentando abatir tus sacras alas!

Si tras siglos blasones nos regalas,

de tu fiel talismán -que daño acota-,
¡un regalo de paz tu pueblo espera!
 11

¡Miradas de soles! ¡Oh mi España,

heredad de olivos y azucenas,
de mieses y rosales, yerbabuena
y luna de un cristal que el vaho no empaña!

¡Te amamantó maná de gracia extraña

del que beben ramales de tus venas!
¡Corrientes de una fe que no la enciena
lodazal de conjuros y cizaña!

Tus hijos, que te aman y veneran,

-por tu sagrada enseña de oro y sangre­
¡sangre, oro y alma te ofrecieran!

¡En los cielos antorchas encendieran

por frenar de tus venas el desangre
que rivales cuchillos te inferieran!
 EN HONOR DE LAS DOS HERMANAS
AGUSTINAS ESPAÑOLAS
SOR CARIDAD Y SOR ESTER
ASESINADAS EN ARGEL
EL DOMINGO 23 DE OCTUBRE DE 1994

¡En los Cielos las campanas

repican con frenesí,
y en la entrega de sus Hijas
se goza San Agustín!

¡Honra son de España entera

sus discípulas queridas:
Tras un rosario de amores
han ofrecido sus vidas!

¡Gozosas van caminando

al encuentro de Dios-Padre,
y sus manitas le llevan
crisoles de amor y sangre!
¡Crisoles de sacrificio
por amor inconquistable,
por amor incomprendido
entre fiereza y desmadre!
 ¡Argelinos, adorad
la tierra donde cayeron
abatidas por las balas
de aquellos que recibieron
tanto amor y tanta entrega
y por ellos fenecieron!

¡Argelinos, argelinas,
en esa tierra gloriosa
donde dos Rosas murieron,
sembrad florestas de rosas,
de jazmines, clavellinas ...!

· ¡Todas son poquita cosa

para Rosas agustinas!

¡Poned, en medio, una cruz:

Enseña de Luz divina!
¡POBRES NIÑOS DE LA CALLE!

Afán de riqueza ...

del mundo, ¡dolor y pobreza!
La autora

¡Muchas noches pasé en vela,

se espantó mi dulce sueño,
al saber del triste drama
de unos niños brasileños!

A dormir me rebelaba
en mi cómodo colchón,
en sábanas de franela
y floreado edredón ...!

Hasta, la eléctrica manta

que suele darme calor,
en esas noches me daba
un frío estremecedor...

¡Ay dolor! ¡Ay, cuánta pena

y cuánta desolación
la de esos niños que duermen
bajo bancos, bajo puentes,
. .
sm arropos, sm amor...
 ¡Pobres niños brasileños,
niños del Sur, de la calle,
niños del viento, del fuego,
de las estrellas, del hambre!

¡Pobres ángeles que vuelan

tras unos brazos que amparen
el clamor de una orfandad
que no reconoce nadie!
¡Ni nadie que ponga freno
a letal peregrinaje!

¡Si, letal; porque, esos niños,

buscando calor de alguien,
tienden sus tiernos bracitos
a canallas chupasangre;
a fieras que se disfrazan
para de bienes lucrarse,
y, ¡ay do1or.1, s1• no convi• enen ...
al final.. ¡eliminarles!

¿Dónde están los poderosos?

¿Dónde están los gobernantes?
¿Dónde están hoy los que pueden
de ese holocausto librarles?
 ¿Qué tácito endiosado hilo
enlaza Ley y pillaje,
que humana fuerza no hay
que los descubra y quebranten?

¡A sus anchas, ¡ay!, perduran

injusticias y desmadres!

¡Rogad, luceros y estrellas;

almas del mundo, rogad,
por esos niños del Sur,
niños de Bosnia, Ruanda,
y niños del mundo entero,
y por los niños que, en Zaire,
mueren de inanición
por la ambición de los hombres!

¡Los corazones se acoran,

tierra y piedras se estremecen,
las estrellas palidecen
y, mares y cielos, lloran!
GLORIA A LOS CUATRO HERMANOS
MARISTAS ASESINADOS
EN EL ZAIRE EL DÍA 30
DE OCTUBRE DE 1996

¡Afanados estaban fieros vientos

en brindarle una cruz a cada Hermano,
mientras ellos labraban, mano a mano,
paso a paso, crisol de amor y alientos

para enterrar desmadre y sufrimientos

de un vivir y morir más que infrahumanos
de aquellos que aún llamamos hoy hermanos
según mandan los Santos Mandamientos!

¡Amor de Jesucristo les doblega

a izar el madero hasta el Calvario,
donde prenden claveles de su entrega!

¡Oh sangre derramada, que hoy nos riega

de Amor la Navidad y su Rosario,
que un mundo, en su delirio, en vano niega!
 PELDAÑOS DE MI VIDA

Hoy me sé medio viva y medio muerta,

así atravesé peldaños de mi vida.
Quise vivir a un sueño siempre asida
por no anclar mi navío en isla incierta.

Buscando está calor mi mano yerta,

pues, de tanto remar, está aterida,
y hasta el alma me siento ya vencida
y vencida mi vista... ¡siempre alerta!

Fue por mar tenebroso mi bogar

intentando alcanzar soñada orilla
de verde-azul y nacarada arena.

¡No vencí al tifón que me encadena

a eterna oscuridad! ¡Oh maravilla
si una estrella, al final, viera brillar!

-
 EN MIS DÍAS DE AFANES
SIN DESCANSO

¡Oh, soledad por mí tan deseada,

qué lejos de mis lares te presiento!
¿Quién me diera gozar por un momento
la grata placidez de tu morada?

¡Zafar de este loquero la lazada

que anudada a mis miembros fuerte siento;
cual águila, volar; ser brisa, viento
o agua cantarina en la cascada!

¡Qué me duele la carne y mi alma llora;

qué me crujen los huesos, Padre mío!
¡Mi jaula es pequeña y me aprisiona!
¡No te hallé, soledad, y tengo ahora,
estertores de muerte y suelo frío!
¡Sólo en ti veo la paz que me ilusiona!
 NO TEMO A LA MUERTE

¡No me espanta la muerte! A mis años...

preferible es morir; ya, a tiempo,
un reguero de amor, de luz y aliento,
dejar pude a los míos y a extraños.

¡Aflige un mundo loco; sus engaños

nos mina el corazón a paso lento;
nos hiere este vivir en desaliento
rendido a una verdad de crueles daños!

¡Templa tanta ambición, tanta locura,

¡oh mundo!, ¿a dónde vas sin freno y ciego
dejando, tras tu trote, desventura?

¡Alcemos voz y vista allá a la altura,

clamando -vive Dios- un sacro riego
de lazos de hermandad ...! ¡Diosa ventura!
 LLAMÉ AL CIELO

A las puertas del Cielo yo he llamado

y el Cielo -así es- me ha respondido.
Desde entonces, deseos he sentido
de dar a conocer lo que he logrado.

Hoy me gozo y me siento compensado

de los muchos azotes que han sufrido
mi espíritu y carne..., si han valido
para hallar ese reino tan sagrado.

Hoy ofrendo un mensaje: ¡valentía

para afrontar las ruedas de un destino
que es la luz y esperanzas de un mañana!:

¡Posesión de otra era soberana

que cualquiera no halla en su camino
por negarse a creer tanta alegría!
 NOVIEMBRE

Noviembre se llama
el mes de los muertos.
Nos trae recuerdos
de seres queridos
que dé aquí se fueron.

¡Seres que lloraron

a otros seres muertos
bajo nuestro sol,
bajo nuestro techo!

Se fueron mis padres,

hermanos se fueron,
se fue mi marido
y amigos se fueron ..

¡A un reclamo del Padre,

todos acudieron!

No sólo en noviembre
yo rezo por ellos:
cada mes del año,
todo el año entero,
con todos convivo
los llevo en la urna
que guardo en mi pecho.
 Y no rezo sola,
con ellos yo rezo,
y me dicen del gozo
que gozan los nuestros.
Bendita esa paz
que gozan los muertos!
¡Seguiré rezando
hasta el gran momento
que la sabia Muerte
cercene mi aliento!
¡Eterno viaje
que me lleva a ellos
y puertas me abre
de ese lar sagrado,
de ese lar de silencio,
pregonero de paz
que gozan los muertos!
¡Bendita esa paz
que gozan los nuestros!
¡Bendita esperanza
del vivir eterno!
 ESCÚCHAME, SEÑOR

¡Escúchame, Señor!:
Están cansados,
de articular, mi voz;
de mirar, mis ojos;
de caminar, mis pasos;
de rezar, mis labios;
de tolerar, mis nervios;
de comer, por vivir;
de reir, llorando;
de cantar, soñando;
de sentir, ¡por todos
ante tantos daños!

Estoy cansada
¡de escuchar falacias
y ofenderte tanto!

Si remediar no puedo
en algo este ocaso...
¡no ansío esta vida
si a ella le niego
un ástil de apoyo,
tenderle mis manos
o, s1qmera... unos versos
de sabor humano!
¡Soy toda apatía, desgana y letargo!
 DESCONTENTO

No encuentro lugar y espacio

para v1vlr... respirar...
El suelo me viene escaso
siendo inmenso cual la mar.
¡Oh ambición que domina
al hombre en su caminar
por huellas que otros dejaron
sin que logremos borrar!
Ante tanto descontento ...
a veces suelo pensar
que, ¡fosa de metro y medio,
al final me ha de bastar!
 Yo me llamo Rosario Pascual Lira;
nací en la Ducal Villa de Osuna;
donde un gran "Bachiller" tuvo su cuna
y el halo de sus huellas se respira.

No me trae hoy aquí la vana mira

de alcanzar, con mis versos, Sol o Luna;
estar entre vosotros ya es fortuna:
ilusión que, alentándome, me inspira.

Medio siglo, en la Villa de Paradas,

ejercí de matrona y practicante,
reñida con la pluma y la almohada:

Siete hijos, viuda, y al pueblo dada,

de quietud no gocé un solo instante
y clamé por ser vieja y jubilada.
Hoy ya gozo de paz aquí en Paradas,
y, aunque tengo a Morfeo por amante ...
¡con la pluma flirteo de madrugada!
 INDICE
PROLOGO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
PENSAMIENTOS . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
LEY DE VIDA Y AMOR . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8
A MIS HIJOS, NIETOS Y BISNIETO . . . . . . . . . . . . . . . . 9
BOSQUEJO DE MIS CUATRO HIJAS . . . . . . . . . . . . . . . . 10
A MI HIJO ANTONIO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
TRAS LA FORTUNA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 12
A TI MATRONA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
A TI, MUJER ABORTISTA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
¡AY, JUVENTUD! . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
UN VALIOSO AMIGO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
A DON RICARDO BENJUMEA-CANSINO . . . . . . . . . . . . . . . 17
A LA NEVADA DEL AÑO 54 EN PARADAS (SEVILLA) . . . . . 20
A DON RAMON GOMEZ DE LA SERNA . . . . . . . . . . . . . . . 21
A LA FUENTE DE MI PUERTA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22
AL VIEJO MERCADO DE ABASTO DE PARADAS (SEVILLA) . 25
A LA MEMORIA DEL PARROCO DON RAFAEL BAREA Y DIAZ 26
VOZ DEL PUEBLO POR DON RAFAEL BAREA Y DIAZ . . . . . 27
LA AZUCENA SEVILLANA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28
A LA MEMORIA DE JUAN XXIII . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31
A NUESTRO PAPA PABLO VI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32
LLEGASTE NAVIDAD . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
¡OH MADRE LLUVIA! . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . l4
VASO DE AMOR . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
¿A DONDE IRE? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
A DON ANTONIO LEON ROMAN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
SOLO TRAS LA MUERTE .................................................................................................38
VIVIMOS Y MORIMOS BAÑADOS DE ESPERANZAS ............................................39
A UN AMIGO CUANDO SE ORDENO DE SACERDOTE ........................................40
NO SE COMO DIOS NO SALTA UN DIA .................................................................. 41
SAN JUAN DE LA CRUZ ..................................................................................................42
FUE UN MILAGRO .............................................................................................................43
A SAN ISIDORO ARZOBISPO DE ZARAGOZA .........................................................48
A DON NICANOR MORILLO...........................................................................................49
A MANUEL NAVARRO .....................................................................................................50
A LA MEMORIA DE DON ENRIQUE MONTOYA ................................................... 51
A UN VINO............................................................................................................................52
A DON FRANCISCO MARIN. "BACHILLER DE OSUNA" ...................................... 53
EL TORITO Y LA LUNA ...................................................................................................54
AL DOCTOR SANCHEZ DE LA CUESTA ................................................................... 55
SONETILLO DEL DOCTOR SANCHEZ DE LA CUESTA.........................................56
CONTESTANDO AL SONETILLO DEL DOCTOR.......................................................57
BUSCANDO LA SALUD ....................................................................................................58
SOLICITANDO NUEVA CONSULTA ..............................................................................59
SOLICITANDO UN TRASPLANTE DE CORAZON ....................................................60
EN EL OBITO DEL DOCTOR SANCHEZ DE LA CUESTA .................................... 61
LA REINA SANTA...............................................................................................................62
A LA ROSA ...........................................................................................................................62
A UN COMPAÑERO SANITARIO ...................................................................................63
A MARIA JOSE MORENO .................................................................................................65
A EMFERMA PARALITICA...............................................................................................68
LAGRIMAS DE UN MARINERO .....................................................................................70
VI A UN POETA ................................................................................................................. 71
AL PINTOR CARLOS BARBER .......................................................................................72
PRODUCTOS CONGELADOS ...........................................................................................73
A MIGUEL HERNANDEZ ..................................................................................................74
DIME, MIGUEL .....................................................................................................................75
A ALFONSINA STORI NOVIA DEL MAR....................................................................76
A ALFONSINA AGUILA.....................................................................................................77
FALTAS ORTOGRAFICAS .................................................................................................78
¡OH ESPAÑA! ........................................................................................................................82
EN HONOR DE LAS HERMANAS AGUSTINAS ASESINADAS
EN ARGEL ................................................................................................................... 84
POBRES NIÑOS DE LA CALLE ..................................................................................... 86
A LOS CUATRO HERMANOS MARISTAS ASESINADOS EN ZAIRE . . .... 89
PELDAÑOS DE MI VIDA ................................................................................... 90
MIS DIAS DE AFANES SIN DESCANSO .................................................................... 91
NO TEMO A LA MUERTE ............................................................................................... 92
LLAME AL CIELO............................................................................................................... 93
NOVIEMBRE .......................................................................................................................... 94
ESCUCHAME SEÑOR......................................................................................................... 96
DESCONTENTO .................................................................................................................... 97
YO ME LLAMO ROSARIO PASCUAL LIRA ............................................................. 98

ROSARIO PASCUAL LIRA

HA PUBLICADO LOS SIGUIENTES TITULOS:

La apendicitis de doña Petra y poesía varias (1974)

Saetero sevillano (1983)
Horizontes de luz y sombra (1989)
Soplo de esperanza (1993)
Manojo de sentimientos (1994)
TEATRO: La apendicitis de doña Petra; Bonaparte
y la Quemá; diferencia por la Cultura (1994)
Cofre de recuerdos y sentimientos (1995)