El derecho concursal es un marco normativo que otorga lineamientos a
las empresas cuando presentan problemas de inviabilidad, su inexistencia traería como consecuencia que esta empresa tenga una salida desordenada del mercado, debido a la canibalización de su patrimonio por el actuar individual de los acreedores que buscan asegurar su crédito, es por ellos que nuestro sistema concursal peruano brinda la protección necesaria a la sociedad, generando un ambiente idóneo para que los acreedores tomen decisiones eficientes y de forma conjunta, teniendo como opciones la restructuración y la liquidación de la empresa. Siendo el Estado a través de INDECOPI, quien participa de manera subsidiaria en el procedimiento, es por ellos que se establece que el derecho concursal es útil para el ordenamiento jurídico.
Remedio para los problemas de inviabilidad empresarial.
¿Qué sucedería si una empresa se vuelve insolvente? ¿Qué generaría
la salida de la empresa insolvente del mercado? ¿El único perjudicado serían los acreedores a los que no se les puede pagar y el deudor que no puede pagarles? Ante esta problemática se debe identificar la gran importancia y relevancia que tiene la existencia del Derecho Concursal en el ámbito empresarial.
Podemos establecer que la existencia del Derecho Concursal ha
mejorado y facilitado la resolución de problemas sobre insolvencia empresarial, tal y como la quiebra en cadena, la cual consiste en que el efecto negativo repercutirá no solamente a los deudores y a la empresa que es considerada insolvente, sino también a todos los acreedores (clientes, proveedores, entre otros), es decir, es gracias al Derecho Concursal que la quiebra en cadena ha regulado y proporcionado una solución, para así evitar los posibles perjuicios que podría acarrear en contra de los acreedores y de la sociedad.
En concordancia con lo anteriormente dicho, se puede decir que la
quiebra en cadena no es negocio para nadie ni mucho menos para el país, pues podría ocasionar crisis a sus acreedores (trabajadores, proveedores, entre otros), es por ello que, inferimos que el Derecho Concursal si es útil para nuestro ordenamiento jurídico, pues, a través de estas normas que nuestro ordenamiento jurídico ha decidido proteger y velar por todo el sector de la actividad económica, pues así no se pierden valiosos recursos que pueden ser aprovechados si las empresas continúan su actividad.
Después de todo lo dicho ¿Cree que es importante el Derecho
Concursal para nuestro ordenamiento jurídico? ¿Cree que podría evitarse la quiebra en cadena sin la existencia del Derecho Concursal?
Decimos que el Derecho Concursal es de gran utilidad para nuestro
ordenamiento jurídico, pues a través de esta que se evita la quiebra en cadena de las empresas insolventes, asimismo, se evita que un gran sector de la actividad económica salga perjudicada debido a los elevados costos sociales que representarían. Sabemos que sin la existencia del Derecho Concursal se habría producido una quiebra en cadena, es decir, se habría producido una crisis que afectaría no solamente a los deudores, sino también afectaría a los acreedores, quienes cumplían cierto rol con la empresa inviable, he aquí la gran importancia de esta regulación a favor de la insolvencia de las empresas.
Con la existencia del Derecho Concursal al ser excepcional, solamente
es aplicable para el caso de insolvencia patrimonial, produciendo un ambiente de prevención sobre las situaciones de crisis económica. Es decir, se crean instrumentos legales o normas orientadas a prevenir situaciones de insolvencia, asimismo, evitar crisis y conflictos entre los deudores y acreedores.
En ese sentido, el Derecho Concursal promueve a través de sus normas
la prevención de una crisis económica e incrementa la posibilidad de reflotamiento de las empresas viables, es decir, otorga una segunda oportunidad a aquellas empresas cuyos activos de liquidez corriente sea mayor que el pasivo de liquidez corriente; pues si estas empresas salen del mercado podrían ocasionar un problema a gran parte del sector de la actividad económica generando una crisis económica.
Bien sabemos que la insolvencia de una empresa genera por sí un alto
grado de incertidumbre y un elevado grado de riesgo entre los acreedores y deudores, generando crisis económica; es ahí donde surge el Derecho Concursal evitando que esa crisis económica se agrave, además, la prevención de la crisis es menos costosa y más eficiente que el tratamiento que se le daba anteriormente. Con el Derecho Concursal se les otorga una segunda oportunidad a las empresas viables, generando una mayor seguridad y un ambiente idóneo, previniendo así una crisis económica que podría afectar gravemente a la sociedad y al Estado, eso lo logra tomando todas las precauciones posibles.
Es propicio indicar que el ambiente de la negociación debe de ser el
adecuado, todos los acreedores deberán reunirse en la junta de acreedores donde se tomaran las decisiones de la viabilidad de la empresa si el valor del negocio en marcha es mayor que el valor del negocio en liquido la empresa podrá ser reestructurada, pero si el valor del negocio en liquido es mayor que el valor del negocio en marcha la empresa tendrá que liquidar.
De manera que la finalidad de la junta de acreedores es la protección del
crédito, pero dicha protección ha sufrido cambios en nuestra Legislación Peruana, que explicaré en las siguientes líneas, la Ley General del Sistema Concursal se basaba en los objetivos y principios de la ley N° 27809 la cual establece que los objetivos del sistemas concursal es la permanencia de la unidad productiva, la protección del crédito y el patrimonio de la empresa, es decir el legislador manifiesta múltiples objetivos que de alguna manera lo torna complejo para el intérprete y para la aplicación de ésta.
A causa de ello el Decreto Legislativo Nº 1050 modifico a la ley
anteriormente mencionada con respecto al objetivo de la ley, en la cual ya no tendrá múltiple objetivo, sino que solo se enfocará en la protección del crédito mediante la regulación de procedimientos concursales, ya que la protección al crédito que establece la ley es el eje principal y finalidad del sistema concursal ya que este objetivo va a brindar seguridad a las operaciones comerciales.
Con el objetivo ya señalado, ahora podemos tratar sobre los beneficios
que trae la legislación concursal de manera que pretende proteger el crédito, podemos decir que es considerable desde la óptica de los acreedores ya que otorga seguridad a las operaciones comerciales que van a realizar, puesto que ellos tienen en claro el riesgo ya que cuenta con un sistema concursal rápido y efectivo. Por esa razón INDECOPI señaló en la exposición de motivos de la Ley General Del Sistema Concursal resaltando que el segundo efecto del concurso es la protección del patrimonio concursado, de que no existir generaría la posibilidad de que cualquier creedor pueda ejecutar por su parte, lo que va a incentivar que cada acreedor ejecute de manera individual cuando descubran la situación en crisis del deudor, a consecuencia de ello desincentivaría la búsqueda de acuerdos colectivos, eliminando la esperanza de los acreedores acerca de la bondad de la opción colectiva como mecanismo para enfrentar la crisis del deudor.
Asimismo, trataremos sobre la perspectiva del deudor, en la cual nos
muestra que un sistema como el que tenemos en nuestro país reduce el costo de acceso al crédito, dado que el sistema brinda seguridad a los acreedores, en la cual motivará a estos a últimos efectuar prestamos oportunos y menos onerosos. Como consecuencia generará disposición del capital de trabajo para las empresas con tasas de interés disminuidas y con mayor rentabilidad.
Consideramos que el Derecho Concursal es un conjunto de normas que
regulan sobre temas de inviabilidad empresarial, generando una mayor seguridad a los deudores, acreedores y al sector de la actividad económica; por lo que después de haber plasmado todos los beneficios que acarrea el Derecho Concursal, inferimos que sí es de gran utilidad para el ordenamiento jurídico peruano.
CONCLUSIONES
El derecho concursal resulta beneficioso en cuanto a la reducción de
costos de transacción ya que facilita la negociación y genera un incentivo para que el deudor lleve a cabo el procedimiento concursal; así como también para que los acreedores participen en este proceso y tomen las mejores decisiones tanto para ellos como para el deudor ya que la determinación de la continuidad o no de una empresa afecta a la sociedad en conjunto.