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Diversidad de ecosistemas del estado de Guanajuato

Chapter · January 2012

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Sergio Zamudio
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Capítulo

18 | La Biodiversidad en Guanajuato
C apítulo 7
RESUMEN
Sergio Z amudio Ruiz

Ecosistemas

P or su posición geográfica en el centro de la República Mexicana, el


estado de Guanajuato participa de tres de las provincias fisiográficas y
geológicas de México: en el norte y noroeste la Mesa del Centro, en el
extremo noreste una pequeña porción de la Sierra Madre Oriental y ocu-
pando la parte sur el Eje Neovolcánico. La confluencia de estas tres regiones
en el territorio del estado produce un paisaje accidentado, diverso y rico en
geoformas, en el que la presencia de sistemas montañosos alterna con lla-
nuras, valles, mesetas y con los profundos cañones de los ríos Santa María
y Xichú, que resultan en un complejo mosaico de climas, suelos y vegetación.
Guanajuato puede considerarse como un estado moderadamente rico por
su diversidad de ecosistemas. De acuerdo con el sistema de clasificación de la
vegetación de México de Rzedowski (1978), los principales tipos de vegetación
registrados en el estado son: bosque de Quercus, bosque de coníferas, bosque
tropical caducifolio, matorral xerófilo y pastizal. Además, en pequeños encla-
ves se pueden encontrar elementos del bosque mesófilo de montaña, vegeta-
ción acuática y subacuática, así como bosques de galería.
En este capítulo se describen cada una de las comunidades vegetales
encontradas en el estado. Los mapas de vegetación potencial –que es una
representación hipotética de cómo debieron estar distribuidos los tipos de
vegetación antes de la influencia del hombre en la región– y actual ejem-
plifican el cambio que han tenido los ecosistemas y hacen evidente la agu-
da pérdida de la cubierta vegetal del estado.
En la actualidad todos los tipos de vegetación de Guanajuato se encuen-
tran fuertemente deteriorados. La mayoría de las comunidades vegetales
han sufrido cambios profundos en su estructura, composición florística y
fisonomía, de tal manera que sus áreas de distribución se han reducido
paulatinamente, al grado de que en muchos sitios se observan sólo restos
de la vegetación original, sobre todo en áreas hoy utilizadas extensivamen-
te con fines agrícolas en el centro y sur del estado. Las comunidades vege-
tales más impactadas por la agricultura son el mezquital y el matorral
micrófilo, que prácticamente han desaparecido del estado; por su parte el
pastizal natural y el bosque tropical caducifolio corren el riesgo de desapa-
recer por completo del estado en un futuro no muy lejano y es probable que
algunos de sus elementos ya se hayan perdido.
Al comparar la superficie ocupada actualmente por cada tipo de vegetación
con la que debió haber cubierto, de acuerdo con el mapa de vegetación poten-
cial, se puede observar que la superficie originalmente cubierta por todos los
tipos de vegetación se ha reducido en el estado en un porcentaje cercano a 66%.
Más de la mitad del territorio está ocupado por extensas parcelas agrícolas,
zonas urbanas, industriales y vías de comunicación, y el bosque tropical cadu-
cifolio ha sido el más afectado ya que se estima que de su área original sólo se
conserva 8.32%. Otros tipos de vegetación en los que su área de distribución
se ha reducido en más de 50% son el bosque de encinos, el matorral xerófilo y

Fotografía de Sergio Zamudio Ruiz.

Ecosistemas | 19
Capítulo

el pastizal natural. Contrasta en cambio el hecho de que la superficie ocupada


por los bosques de Abies y Pinus se ha reducido muy poco, lo cual podría
explicarse por la ubicación de estas comunidades en sitios poco accesibles y
alejados de las poblaciones importantes.
Se debe enfatizar que el proceso de deterioro de los ecosistemas en el
estado continúa, ya que los factores causantes de su destrucción siguen
presentes, por lo que su situación puede empeorar en el futuro inmediato.
Se debe tomar en cuenta también que en muchos sitios la eliminación
de la cubierta vegetal ha desencadenado la ocurrencia de severos procesos de
erosión y degradación del suelo, que no han sido evaluados cabalmente y en
consecuencia no se han tomado las medidas necesarias para evitar su
avance o reducir su extensión.
Ante este panorama es urgente que se realice un diagnóstico detallado
de la erosión del suelo en el estado y se detecten las áreas susceptibles de ser
conservadas, con el fin de que se tomen medidas para proteger la vegeta-
ción, se propicie la restauración de muchas áreas deforestadas y se intente
detener el desgaste.
Como estudios de caso se analiza la vegetación del municipio de San José
Iturbide y la situación de los lagos cráter del Valle de Santiago.

20 | La Biodiversidad en Guanajuato
DIVERSIDAD DE ECOSISTEMAS DEL
ESTADO DE GUANAJUATO Sergio Z amudio Ruiz

Regionalización ecológica

Introducción

El estado de Guanajuato, por su posición geo- tituidas por rocas de origen volcánico, metamór-
gráfica forma parte de tres provincias fisiográ- fico, sedimentario y aluvial; en el que alternan
ficas y geológicas de México: en el norte y no- la presencia de llanuras, valles, lomeríos y me-
roeste la Mesa del Centro, en el extremo noreste setas, con los profundos cañones de los ríos San-
una pequeña porción de la Sierra Madre Orien- ta María, Xichú y sus afluentes locales, así como
tal y toda la parte sur el Eje Neovolcánico ( spp, con sistemas montañosos de diferente altitud,
1980). La confluencia de estas tres regiones en los que consecuentemente producen un comple-
el territorio del estado conforman un paisaje jo mosaico de climas, suelos y vegetación local.
accidentado, diverso y rico en geoformas, cons-

Fotografía de Sergio Zamudio Ruiz.

Zamudio, S. 2012. “Diversidad de ecosistemas del Estado de Guanajuato” en La Biodiversidad en Guanajuato: Estudio de Estado vol. II. México. Comisión
Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad ( conabio )/Instituto de Ecología del Estado de Guanajuato ( iee ), pp. 21-55.

Ecosistemas | 21
Capítulo

7 Mesa del Centro La Sierra Madre Oriental

La Mesa del Centro se caracteriza por la pre- Está constituida por rocas sedimentarias marinas
sencia de amplias llanuras de origen aluvial del Mesozoico, con predominancia de calizas y
interrumpidas por sierras dispersas, en su ma- lutitas. El clima es seco y cálido en el norte
yoría de naturaleza volcánica. En ella predo- (Torreón-Monterrey) pero cada vez más húmedo
minan los climas semiseco y templado, la hu- y tornándose semicálido hacia el sur y en las
medad aumenta de norte a sur y del centro cumbres más elevadas. En las partes más altas
hacia los extremos oriental y occidental. Los de casi toda la provincia hay bosques de coní-
tipos de vegetación son los característicos de feras, que ceden su lugar a matorrales en las
las zonas áridas y semiáridas. En la parte de la laderas norte y este, y a bosque mesófilo de mon-
Mesa del Centro correspondiente a Guanajuato taña o bosque tropical caducifolio en el centro
la región comprende sectores de dos cuencas y sur. En el extremo noreste del estado penetra
hidrológicas: la del río Lerma-Chapala y la del una pequeña parte de esta provincia, la que es
alto río Pánuco. Además, hay áreas que corres- llamada subprovincia de la Sierra Gorda.
ponden a dos subprovincias: los Llanos de Ojue-
los y las Sierras del Norte de Guanajuato, y dos Subprovincia de la Sierra Gorda
discontinuidades fisiográficas: la Sierra de Cua-
tralba y los valles paralelos del suroeste de la Esta subprovincia abarca los municipios de
Sierra de Guanajuato. Xichú, Atarjea y parte de Victoria. Cubre 5.37%
de la entidad. Su morfología está directamente
Eje Neovolcánico asociada a dos sistemas hidrológicos, ambos
integrantes de la cuenca del Pánuco: los ríos
Ocupa la mitad sur del estado de Guanajuato Santa María y Xichú y sus afluentes locales.
y está conformado por una enorme masa de Estas corrientes han labrado profundos valles
rocas volcánicas de todos los tipos, acumula- ramificados, a veces amplios y cóncavos (siste-
da a lo largo de innumerables y sucesivos epi- ma Xichú-Mezquital) y otros relativamente es-
sodios volcánicos. La integran grandes sierras trechos (Santa María y afluentes).
volcánicas, coladas lávicas, conos dispersos, En esta provincia, en las zonas más bajas,
amplios escudo-volcanes de basalto, así como entre 1 000 y 1 500 msnm, con climas semicá-
depósitos de arena y cenizas, dispersos en ex- lidos y semisecos se desarrollan matorrales xe-
tensas llanuras. Otro rasgo esencial de esta rófilos submontanos y crasicaules; hacia la
provincia es la ocurrencia de amplias cuencas parte media, entre 1 500 y 2 520 msnm, bajo
cerradas ocupadas por lagos, como el de Cuit- climas semiseco y templado subhúmedo, bos-
zeo, o por llanos que se formaron por los de- ques de encino o de pino-encino.
pósitos en lagos antiguos. El clima dominan- Existe una fuerte coincidencia entre la deli-
te de la provincia es templado subhúmedo, que mitación de estas provincias geológicas y fisio-
hacia el poniente pasa a semicálido y hacia el gráficas con las provincias florísticas de México
norte a semiseco. En las altas cumbres se en- propuestas por Rzedowski (1978). La Mesa del
cuentran climas semifríos subhúmedos. Com- Centro coincide con la provincia florística de la
prende casi toda la cuenca del río Lerma que Altiplanicie, ubicada dentro de la región Xerofí-
se origina al este de Toluca y atraviesa el Ba- tica Mexicana y el reino Neotropical, que se
jío guanajuatense hacia el oeste, hasta vertir caracteriza por la alta proporción de flora endé-
sus aguas en el Lago de Chapala. La vegetación mica y sus afinidades con la flora tropical; mien-
que prevalece en esta región está formada por tras que la porción de la Sierra Madre Oriental
bosques de coníferas y de encinos en las par- del extremo noreste del estado concuerda con la
tes altas, por arriba de 2 200 msnm y el bos- provincia florística de la Sierra Madre Oriental,
que tropical caducifolio en los terrenos que ubicada en la región Mesoamericana de Montaña,
quedan por debajo de esta altitud. que participa en su composición florística de

22 | La Biodiversidad en Guanajuato
elementos tanto del reino Holártico como del torral submontano; los demás tipos de vegeta-
Neotropical. Lo mismo ocurre con la región fisio- ción se distribuyen indistintamente en las tres
gráfica del Eje Neovolcánico, que se considera regiones cuando existen las condiciones climá-
parte de la provincia florística de las Serranías ticas propicias para su desarrollo.
Meridionales, ubicada en la región Mesoameri-
cana de Montaña, en la que también participan Antecedentes
elementos florísticos tanto del reino Holártico
como del Neotropical. Alejandro Pineda publicó en 1978 un bosquejo
Es necesario resaltar el hecho de que la ma- de la vegetación del estado, en el que reconoce
yoría de las sierras del estado (con la excepción los siguientes seis tipos de vegetación: bosque de
de la Sierra Madre Oriental), que presentan bos- pino-encino, encinar, selva baja caducifolia, mez-
ques de encino o de pino por encima de 2 200 quital, matorral crasicaule y pastizal. Posterior-
msnm, se ubican dentro de la provincia florística mente, en la Síntesis geográfica del estado de
de las Serranías Meridionales, mientras que la Guanajuato (spp, 1980), se describen 17 tipos de
parte de la provincia fisiográfica del Eje Neovol- vegetación para el estado: bosque de pino, bosque
cánico, que se encuentra por debajo de esta cota de pino-encino, bosque de encino-pino, bosque
altitudinal y que se caracteriza por la presencia de encino, chaparral, bosque de enebro, matorral
del bosque tropical caducifolio, podría conside- crasicaule-cardonal, matorral crasicaule-nopale-
rarse una extensión de la provincia florística de ra, matorral desértico micrófilo, matorral desér-
la Costa Pacífica de la región Caribea y del reino tico rosetófilo, matorral submontano, matorral
Tropical, en el sentido de Rzedowski (1978). subtropical, mezquital, pastizal natural, pastizal
halófilo, pastizal inducido y tular.
Vegetación Más tarde, se realizaron algunos estudios de
vegetación de alcance regional, los que ayuda-
Introducción ron a incrementar el conocimiento de las comu-
nidades vegetales del estado, como: la vegetación
En la actualidad la cubierta vegetal del estado del municipio de Acámbaro (Rivas, 1980), la
de Guanajuato se encuentra fuertemente dete- vegetación de las serranías de la cuenca alta del
riorada, en muchas áreas la vegetación ha sido río La Laja (Quero, 1984), el bosque tropical ca-
destruida por completo y sustituida por campos ducifolio en la región del Bajío (Rzedowski y
agrícolas y zonas de pastoreo, por lo que más de Calderón de Rzedowski, 1987), la Hoya del Rin-
la mitad del territorio está ocupado por extensas cón de Parangueo (Aguilera, 1991), la vegeta-
parcelas agrícolas, zonas urbanas, industriales ción y flora acuáticas de la laguna de Yuriria
y vías de comunicación. A pesar de esto, todavía (Ramos y Novelo, 1993), la Sierra de los Agusti-
se pueden apreciar los rasgos distintivos de la nos (Rubio, 1993), los pastizales calcífilos del
vegetación original, conservada sobre todo en estado de Guanajuato (Rzedowski y Calderón de
las regiones montañosas más alejadas de las ciu- Rzedowski, 1995), la vegetación y la flora del
dades y pueblos de difícil acceso. noreste del estado (Rzedowski, Calderón de Rze-
La distribución de la vegetación en el estado dowski y Galván, 1996), la vegetación de la Sie-
está relacionada en términos generales con la rra de Santa Rosa (Martínez, 1999), así como la
ubicación y extensión de las provincias fisio- flora y fitogeografía del municipio de San José
gráficas y geológicas. Cada provincia fisiográ- Iturbide (Gutiérrez-Gallegos, 2004).
fica posee al menos un tipo de vegetación De acuerdo con el sistema de clasificación de
particular que la diferencia de las demás, por la vegetación de México de Rzedowski (1978),
ejemplo, en la Mesa del Centro se encuentran el que se sigue en este trabajo, los principales tipos
matorral crasicaule de Opuntia-Zaluzania o no- de vegetación registrados en el estado son: bos-
paleras, el matorral micrófilo y el pastizal; en que de Quercus, bosque de coníferas, bosque
el Eje Neovolcánico prevalece el bosque tropical tropical caducifolio, matorral xerófilo y pasti-
caducifolio y en la Sierra Madre Oriental el ma- zal. Además, se encuentran pequeños enclaves

Ecosistemas | 23
Bosque de Quercus jonesii
Capítulo

7 de bosque mesófilo de montaña, vegetación


acuática y subacuática, así como bosques de ga- En el noreste del estado, en los municipios de San
lería (figura 1) (Carranza, 2005). Luis de la Paz y Xichú, en una franja altitudinal
que va de 1 550 a 1 700 msnm, sobre sustrato de
Descripción de los tipos de vegetación rocas ígneas y suelos muy delgados, con grandes
afloramientos de rocas y en climas que van del
Bosque de Quercus templado seco Cw0, al templado intermedio Cw1,
se desarrolla un bosque de encinos dominado por
Los bosques de Quercus o encinares son comuni- Quercus jonesii, en el que el estrato arbóreo es
dades vegetales características de las áreas de bajo y abierto de 3 a 7 m de altura. Este encino
clima templado y semihúmedo que se distribuyen puede encontrarse formando comunidades puras
en las regiones montañosas del país, la mayoría o mezclado con otros encinos como Quercus gri-
se encuentran entre 1 200 y 2 800 m de altitud; sea, Q. laeta, Q. obtusata, Q. polymorpha y Pinus
prosperan principalmente en condiciones de cli- teocote. En el estrato arbustivo, las especies do-
ma templado subhúmedo Cw, de la clasificación minantes son Arctostaphylos pungens, Comaros-
de Koeppen (1948), pero también se extienden taphylis glaucescens, C. polifolia, Pernettya cilia-
hacia otros climas (Rzedowski, 1978). ta, Rhamnus microphylla, Stevia salicifolia y otras
Se estima que los encinares ocupaban origi- más. Este bosque colinda en su límite inferior con
nalmente casi 20% de la superficie del estado de los matorrales xerófilos, de hecho, el encino que
Guanajuato (figura 2), pero actualmente sólo cu- se encuentra más abajo, en las cañadas y mez-
bren cerca de 10%, lo que indica que se ha per- clado con el matorral submontano es Quercus
dido aproximadamente 50% de su área original. laeta. En su límite superior este bosque se mezcla
Se distribuyen en laderas o en la parte alta de los con el bosque de Quercus resinosa, Q. obtusata y
cerros, tanto sobre sustratos de rocas calizas Pinus teocote.
como sobre rocas ígneas. Las principales áreas
cubiertas con este bosque se encuentran en la Bosque de Quercus resinosa
Sierra de Guanajuato, Sierra de Lobos (Sierra de
Cuatralba), Sierra de la Media Luna, Sierra de Pén- En una franja altitudinal superior a la ocupada
jamo, Sierra de Los Agustinos y en la Sierra Gor- por la asociación anterior, entre 1 700 y 2 500
da, con áreas más pequeñas sobre algunos cerros m de altitud, en laderas muy empinadas, sobre
de la parte sur del estado pertenecientes al Eje afloramientos rocosos y suelo delgado y arenoso
Neovolcánico; en regiones con climas templados se encuentra un bosque en el que el estrato ar-
y subhúmedos C(w0), C(w1) y C(w2), en los secos bóreo, de 5 a 8 m de altura, está dominado por
semicálidos con invierno fresco BS1hw, en el Quercus resinosa, y al que frecuentemente acom-
templado con verano cálido (BS1kw), y muy es- pañan: Q. jonesii, Q. obtusata, Q. viminea, Ar-
casamente en el muy seco, semicálido con in- butus glandulosa, A. xalapensis; con la presencia
vierno fresco BWhw; con temperatura media ocasional de Pinus teocote. Esta asociación se ha
anual de 16 a 22 ºC y con promedio de precipita- registrado en la Sierra Gorda, en la Sierra de la
ción anual entre 400 y 850 mm (Angulo, 1985). Media Luna (Quero, 1984), en la Sierra de Santa
En el estado se han registrado 31 especies de Rosa (Martínez, 1999), en la Sierra de Pénjamo
encinos, que forman diferentes asociaciones dis- y en el cerro Grande, cerca de Manuel Doblado.
tribuidas de acuerdo con un gradiente climático En la Mesa del Centro la composición de este
que va de los ambientes cálidos y secos en los bosque cambia un poco, desaparecen Quercus
lugares con menor altitud, hasta los fríos y hú- jonesii y Q. viminea, pero pueden estar presentes
medos en los sitios de mayor altitud. A continua- Q. castanea, Q. deserticola, Q. eduardii, Q. grisea,
ción se describen las diferentes asociaciones Q. gentryi y con frecuencia Pinus cembroides
conocidas en el estado, partiendo de los ambien- (figuras 3 y 4).
tes cálidos y secos.

24 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 1. Mapa de vegetación actual. Representación de la distribución de los principales tipos de vegetación en el estado de gua-
najuato (2010). Resalta la destrucción y desplazamiento de las áreas de vegetación debido al crecimiento de las zonas urbanas,

Ecosistemas | 25
agrícolas, pecuarias e industriales, así como el grado de perturbación de las comunidades vegetales actuales (elaboraron Sergio
Zamudio Ruiz y Carlos Alberto Ramírez Sosa con base en iee, 2009, e Inegi, 1993).
26 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 2. Mapa de vegetación potencial. Representación hipotética de la distribución de los principales tipos de vegetación en el estado
de guanajuato como debieron estar antes de la presencia del ser humano en la región (elaboraron Sergio Zamudio Ruiz y Carlos Alberto
Ramírez Sosa con datos propios).
Capítulo

7
Figura 3. Bosque de encino con Quercus resinosa en el Cerro Grande, municipio de Manuel Doblado,
Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Figura 4. Interior del bosque de Quercus resinosa en el Cerro Grande, municipio de Manuel Doblado,
Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Ecosistemas | 27
Bosque de Quercus affinis
Capítulo

7 En algunas ocasiones, debido a condiciones


En los lugares con mayor humedad ambiental de especiales de clima o al disturbio relacionado
la Sierra Gorda en el noreste del estado, entre con el sobrepastoreo y la ocurrencia periódica de
2 100 y 2 300 msnm, se encuentra un bosque de incendios, estos encinos pueden adoptar la forma
encinos perennifolios de hasta 20 m de alto, en arbustiva y agruparse en matorrales densos que
donde el encino escobillo (Quercus affinis) es la son llamados chaparrales o matorrales esclerófi-
especie dominante, también están presentes: los, los que se encuentran dispersos en las sierras
Quercus castanea (encino blanco o encino asti- del estado (Quero, 1984; Gutiérrez-Gallegos,
lla) y Q. crassifolia, y en las zonas más cálidas 2004). Sus límites climáticos en Guanajuato se
se puede encontrar Q. polymorpha (Rzedowski, sitúan en áreas con temperatura media entre 14
Calderón de Rzedowski y Galván, 1996). Estos y 18 ºC y precipitación anual de 500 a 800 mm.
elementos se encuentran también con frecuencia
en el bosque de pino-encino de la región húme- Bosque de Quercus castanea
da de la Sierra Gorda.
En la parte media y sur del estado el bosque de
Bosque de Quercus eduardii, Quercus grisea y Quercus castanea ocupa la franja altitudinal en-
tre 2 200 y 2 600 msnm, crece sobre sustrato de
Quercus potosina
origen ígneo, en suelos de color pardo y textura
En la región correspondiente a la Mesa del Centro, arenosa; con temperatura y precipitación medias
en una franja altitudinal que va de 2 150 a 2 500 m, anuales que van de 18 a 20 ºC y 550 a 600 mm,
con clima templado subhúmedo (Cw0) y suelo del- respectivamente. El estrato arbóreo tiene una al-
gado, la transición entre los matorrales xerófilos tura promedio de 6 a 8, máximo 15 m. La especie
y los bosques de encinos se produce por una fran- dominante es Quercus castanea, aunque puede
ja de encinares de ambientes secos. El estrato ar- estar acompañada por Q. deserticola, Q. obtusata,
bóreo comúnmente mide entre 5 y 8 m de altura Q. potosina y Q. rugosa. Además son menos fre-
y está formado por varias especies de encinos cuentes: Arbutus glandulosa, A. tesellata, A. xa-
adaptados a crecer en ambientes secos, las especies lapensis, Eysenhardtia polystachya, Persea lieb-
más importantes son: Quercus eduardii, Q. grisea, manni y Prunus serotina. En el estrato arbustivo,
Q. potosina y Q. resinosa, los que están acompaña- de 30 cm a 2 m de altura, las especies más fre-
dos a menudo por otros árboles, como: encinos cuentes son Baccharis pteronioides, B. heterophy-
(Quercus laeta, Q. obtusata), madroños (Arbutus), lla, B. thesioides, Bouvardia laevis, Buddleja
táscate (Juniperus), pinos (Pinus) y otras especies scordioides, Comarostaphylis polifolia, Croton
del género Garrya. Todos ellos tiran las hojas du- morifolius, Montanoa leucantha, Rhamnus mi-
rante la temporada seca invernal y por esta razón crophylla, Salvia melissodora, S. microphylla,
se les llama caducifolios. De estos encinos, Quercus Symphoricarpos microphyllus y Viguiera dentata
grisea es el que se encuentra siempre en el límite (Gutiérrez-Gallegos, 2004) (figura 7).
altitudinal inferior del encinar, donde se mezcla con
los pastizales y matorrales por debajo de la cota de Bosque de Quercus rugosa-Q. obtusata
2 150 msnm. En el estrato arbustivo que va de uno
a tres metros de altura, son abundantes Arctosta- En partes más húmedas de las sierras, en altitudes
phylos pungens, Amelanchier denticulata, Comaros- comprendidas entre 2 300 y 2 700 msnm, con el
taphylis polifolia, Baccharis heterophylla, B. ptero- clima más húmedo de los templados subhúmedos
nioides, Bouvardia ternifolia, Brickellia scoparia, B. (Cw2 ), con temperaturas anuales promedio de
veronicifolia, Buddleja scordioides, B. parviflora, 16 ºC y precipitación de 800 mm, se encuentran
Calliandra eriophylla, Dalea argyrostachya, Eupato- encinares cuyos componentes arbóreos son peren-
rium espinosarum, Eupatorium glabratum, Quercus nifolios, con alturas de hasta 15 m, que forman
microphylla, Rhamnus microphylla, Stevia lucida y comunidades muy densas compuestas por Quercus
S. salicifolia (Quero, 1984; Rzedowski, Calderón de rugosa, Q. obtusata, Q. crassifolia y Q. laurina; con
Rzedowski y Galván, 1996) (figuras 5 y 6). frecuencia hay otros árboles que acompañan a los

28 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 5. Bosque de encino con Quercus eduardii, Q. grisea, Q. potosina, en la Sierra de Cuatralba, municipio de
León, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Figura 6. Interior del Bosque de encino con Quercus eduardii, Q. grisea, Q. potosina, en la Sierra de Cuatralba,
municipio de León, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Ecosistemas | 29
Capítulo

Figura 7. Bosque de encino con Quercus castanea y Q. obtusata en la Sierra de Guanajuato (fotografía de Sergio
Zamudio Ruiz).

encinos, como madroño (Arbutus spp.), tejocote zumae, P. pseudostrobus, P. teocote e Ilex dugesii.
(Crataegus mexicana), pinos (Pinus spp.), capulín El estrato arbustivo de 1 a 2 m de altura es denso
(Prunus serotina subsp. capuli) y aile (Alnus argu- y está formado por Eupatorium spp., Senecio an-
ta subsp. glabrata). Estos encinares están bien re- gulifolius, Stevia lucida, Cestrum anagyris, Budd-
presentados en la Sierra Gorda, al noreste del es- leja cordata, Arctostaphylos pungens y Comaros-
tado, en la Sierra de la Media Luna, en la Sierra de taphylis glaucescens (Martínez, 1999; Rubio, 1993).
Guanajuato, en la Sierra de los Agustinos y, hacia Muchos de los sitios que originalmente conte-
el sureste, en algunas estribaciones de las monta- nían este bosque han sido talados con fines agrí-
ñas que pertenecen al Eje Neovolcánico (figura 8). colas y para la elaboración de carbón (que
contribuye en gran parte al sustento de los habi-
tantes de la región) (Pineda, 1978).
Bosque de Quercus laurina-Q. rugosa
En los sitios con mayor altitud de las sierras del Bosque de encino-pino / pino-encino
estado, entre 2 600 y 2 850 msnm, se presenta un
bosque denso de encinos perennifolios, en el que La similitud de las exigencias ecológicas de los
el estrato arbóreo de 20 a 25 m de altura, está pinares y encinares tiene como resultado que los
formado casi exclusivamente por Quercus laurina, dos tipos de bosques ocupen nichos muy simi-
Q. rugosa (encino avellano) y Q. obtusata; forman- lares, desarrollándose con frecuencia uno al lado
do un estrato arbóreo más bajo, de 6 a 12 m, se del otro, formando mosaicos y complejas inte-
encuentran con frecuencia Arbutus glandulosa, rrelaciones que a menudo se presentan en forma
Garrya laurifolia, Cornus excelsa, Clethra mexica- de bosques mixtos (Rzedowski, 1978).
na, Symplocos prionophylla, Alnus acuminata subsp. En el estado de Guanajuato, los bosques
arguta, Alnus jorullensis, Buddleja cordata, Cra- mixtos de pino-encino, característicos de zonas
taegus pubescens, Prunus serotina, Pinus monte- templado-frías y con mayor representación en

30 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 8. Bosque de encino con Quercus crassifolia, Q. rugosa y Q. obtusata cerca de San Agustín, municipio de
Victoria, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio).

Bosque de coníferas
el estado, se localizan en la Sierra Gorda en los
municipios de Xichú y Atarjea. En esta zona la Los bosques de coníferas son característicos de
temperatura media va de 16 a 22 ºC y la preci- zonas de clima templado y frío del hemisferio
pitación anual es de 600 a 800 mm. Se observan Norte y extienden su distribución hacia el sur a
bosques exuberantes de 20 a 25 m de altura, través de las montañas mexicanas, donde se han
conformados por Pinus devoniana, P. durangen- diversificado ampliamente. Se les encuentra des-
sis, P. pseudostrobus y P. teocote, en la parte de el nivel del mar hasta el límite de la vegetación
más alta de la sierra (2 800 msnm), donde se arbórea; prosperan en regiones de clima semiá-
mezclan con encinares altos de 15 a 20 m (Pi- rido, semihúmedo y francamente húmedo.
neda, 1978; Angulo, 1985). En Guanajuato los bosques de coníferas ocu-
También en la Sierra de los Agustinos se re- paban originalmente 6% de la superficie estatal;
gistra un bosque de pino-encino entre 2 800 y en la actualidad ocupan cerca de 5% y se dis-
3 100 m de altitud, que se extiende por las la- tribuyen en las principales cadenas montañosas
deras y cañadas húmedas de la Peña Blanca, la del estado, en un intervalo altitudinal que va de
Mesa del Redondo y en la Cañada del Aserrade- 2 000 a 3 800 msnm. Las comunidades vegeta-
ro. Las especies de pino que se encuentran en el les de coníferas están representadas tanto por
área son: Pinus montezumae, P. pseudostrobus bosques de ambientes secos, formados por tás-
y P. teocote, asociados con Quercus laurina, Q. cate o enebros (Juniperus flaccida) y pinos pi-
rugosa, Alnus jorullensis, A. acuminata y Cra- ñoneros (Pinus cembroides); así como por
taegus pubescens (Rubio, 1993). Una comunidad bosques de ambientes fríos y con mayor hume-
semejante se ha visto en la Sierra Gorda entre dad, compuestos por Pinus ayacahuite, P. devo-
La Joya Fría y el Puerto de Palmas, en el muni- niana, P. durangensis, P. oocarpa y P. teocote.
cipio de Victoria. Existe también un pequeño enclave de oyamel

Ecosistemas | 31
Capítulo

7 (Abies religiosa) en la parte alta del cerro Zamo- seen afinidades hacia los climas templados a
rano. A continuación se describirá cada una de fríos y semihúmedos y hacia los suelos ácidos,
estas asociaciones con mayor detalle. existen notables diferencias en las preferencias
ecológicas entre una especie y otra. Dentro de
Bosque de Juniperus la zona de clima templado y semihúmedo, los
pinares se mezclan con los bosques de Quercus
Estos bosques son llamados también bosques de y a veces con los de Abies, Juniperus o Alnus
enebro o escuamifolios (Miranda y Hernández, (Rzedowski, 1978).
1963). Crecen en forma discontinua entre 1 300 En Guanajuato se han registrado hasta el
y 2 100 m de altitud, en laderas expuestas al pie momento 10 especies de pinos que forman aso-
de las serranías, en condiciones ecológicas de ciaciones bien definidas.
sequía acentuada. Regularmente se encuentran
en una franja angosta, en la transición entre los Bosque de Pinus oocarpa
matorrales xerófilos y los bosques de pinos pi-
ñoneros o de encinos, con los que se mezclan En la región de la Sierra Gorda, en las cercanías
con frecuencia. El clima en que se desarrollan de los poblados El Gato y El Toro, en el municipio
es el menos seco de los climas secos (BS1kw; de Atarjea, se encuentra un área cubierta con
templado con verano cálido), la temperatura bosque de Pinus oocarpa, que se desarrolla en las
media anual es de 16 a 18 ºC y el promedio de laderas y cañadas con orientación noroeste del
precipitación anual de 400 a 500 mm (Angulo, cerro El Toro, entre 1 000 y 1 800 m de altitud,
1985). Se establecen tanto sobre suelos profun- y que se extiende hacia el estado de Querétaro.
dos como en los delgados y pedregosos. Son Es un bosque denso en el que el estrato arbóreo
bosques perennifolios, bajos y abiertos, en don- alto está formado casi exclusivamente por Pinus
de Juniperus flaccida o táscate es la especie do- oocarpa, que llega a medir de 12 a 15 m de altu-
minante, los árboles miden entre 4 y 8 m de ra. La presencia de esta especie en esta región es
altura y están muy separados unos de otros. Las rara ya que su área de distribución se encuentra
poblaciones de Juniperus flaccida suelen mez- principalmente en el occidente de México.
clarse con los encinares xerófilos de Quercus
grisea y Quercus eduardii o con los bosques de Bosque de Pinus cembroides
pino piñonero (Pinus cembroides). El estrato ar-
bustivo es pobre y puede estar constituido por Los bosques de pinos piñoneros (Pinus cembroides)
elementos propios de los matorrales xerófilos de se distribuyen en altitudes de 1 800 a 2 500 m; en
los géneros Acacia, Agave, Dodonaea, Mimosa, el norte del estado se desarrollan sobre rocas ígneas
Prosopis, entre otros. extrusivas en la Sierra de Jacales, municipio de
En el cerro del Caliche cerca del Vergel, en Ocampo; en la Sierra de San Pedro, en el cerro
el municipio de San Luis de la Paz, sobre laderas Cuchilla Águila, municipio de San Felipe; en la
de rocas calizas y a una altitud de 1 650 m, se Sierra de Santa Bárbara, municipio del mismo
desarrolla un bosque dominado por el enebro nombre, y en la Sierra del Cubo, municipio de San
(Juniperis flaccida), con Brahea berlandieri y un Diego de la Unión, y cerca de La Mesa de Jesús,
estrato arbustivo denso, formado por Juniperus municipio de San Luis de la Paz; además, en las
monosperma, Quercus laceyi y Q. pungens (en- faldas del cerro Zamorano, en los municipios de
cino blanco) (figuras 9 y 10). San José Iturbide, Tierra Blanca y Santa Catarina.
Se desarrolla también sobre laderas de rocas cali-
Bosque de Pinus zas en la Sierra Gorda, al noreste del estado, en el
municipio de Atarjea, en los límites con el estado
Los pinares son comunidades vegetales caracte- de Querétaro. Se establece en lugares con climas
rísticas de las montañas de México y ocupan seco semicálido, con invierno fresco (BS0h) y en
vastas superficies de su territorio. Aunque la el menos seco de los climas secos (BS1kw), templa-
mayoría de las especies mexicanas de Pinus po- do con verano cálido, en los que la temperatura

32 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 9. Bosque de enebros (Juniperus flaccida) sobre laderas de rocas calizas en las cercanías de El Durazno,
municipio de Atarjea, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Figura 10. Enebro (Juniperus flaccida) cerca de Palomas, municipio de Atarjea, Guanajuato (fotografía de Sergio
Zamudio Ruiz).

Ecosistemas | 33
Capítulo

7 media anual oscila entre 16 y 18 ºC y el promedio altura. En estos bosques es común encontrar otros
de precipitación anual varía de 400 a 600 mm árboles como el madroño (Arbutus xalapensis) y
(BS1h), que es el mismo de los bosques de Junipe- varias especies de encinos. Normalmente se mezclan
rus (Angulo, 1985), y en el clima más seco de los en diferentes grados con los encinares y pueden
templados subhúmedos (Cw0). Se presentan en formar en casos particulares dominancias alternan-
suelos someros, bien drenados, con textura de mi- tes entre una y otra especie; los encinos más repre-
gajón arenoso, con pH ácido o básico, con gran sentativos en las diversas asociaciones son: Quercus
pedregosidad y afloramiento de la roca madre. crassifolia, Q. mexicana, Q. obtusata y Q. rugosa
Son bosques perennifolios bajos y abiertos, (Pineda, 1978). Estos se pueden encontrar en la par-
formados por masas casi puras del pino piñonero te alta de la Sierra de los Agustinos y en la Sierra
(Pinus cembroides), en los que la altura de los ár- Gorda, entre La Joya Fría y el Puerto de Palmas, en
boles en pocas ocasiones es superior a 8 metros. el municipio de Victoria (figuras 13 y 14).
Entre los pinos piñoneros se pueden encontrar ár-
boles de táscate (Juniperus flaccida), encinos Bosque de Abies
(Quercus eduardii, Q. grisea, Q. potosina), nogal
(Juglans mollis); así como la presencia esporádica En México este tipo de vegetación está confina-
de la palma china (Yucca filifera) y zoyate (Nolina do a sitios de alta montaña, entre 2 400 y 3 600 m
parviflora). El estrato arbustivo tiene una altura de altitud. En general, requieren para su desarrollo
promedio de 1.5 m y está formado por: Amelan- condiciones de humedad más elevadas; la preci-
chier denticulata, Arctostaphylos pungens, Archi- pitación media anual es por lo común superior a
baccharis serratifolia, Brickellia tomentella, 1 000 mm y las temperaturas medias anuales
Comrostaphylis polifolia, Dalea tuberculata, Das- varían de 7 a 15 ºC. Esta comunidad se presenta
ylirion acrotriche y varios otros (Quero, 1984, en forma de manchones aislados, por lo que su
Gutiérrez-Gallegos, 2004) (figuras 11 y 12). distribución geográfica en México es en extremo
Los bosques de piñoneros en general se en- fragmentaria y dispersa.
cuentran bastante conservados porque no se En el estado este bosque sólo se conoce en la
explotan con fines maderables, ya que los árbo- parte alta del cerro Zamorano, en donde Abies
les con dificultad alcanzan alturas mayores a religiosa (oyamel) es la especie dominante y crece
los 8 m y sus troncos, en la mayoría de los ca- en laderas rocosas muy inclinadas. Los bosques de
sos, crecen torcidos. Por otra parte, no se abren Abies destacan por su majestuosidad y belleza, son
al cultivo por encontrarse en terrenos muy pe- bosques densos en los que los árboles llegan a
dregosos y con poco suelo; tampoco presentan medir hasta 30 m de altura y sus copas cónicas
elementos que puedan usarse para elaborar car- forman un dosel muy homogéneo y cerrado; el
bón. El único uso que se les da es el pastoreo de estrato arbustivo suele ser denso y muy diverso y
ganado caprino y bovino y la recolección de los el herbáceo escaso. El área que ocupan estos bos-
piñones para ser vendidos en los mercados re- ques en Guanajuato es reducida, aunque son más
gionales (Quero, 1984). extensos en la parte del cerro Zamorano corres-
pondiente al estado de Querétaro (figura 15).
Bosque mixto de Pinus
Bosque tropical caducifolio
En condiciones de mayor humedad, en zonas con
climas templados y subhúmedos, en una franja al- Son bosques propios de regiones de clima cálido,
titudinal que va de 2 300 a 2 800 msnm, sobre formados por árboles bajos, que pierden sus hojas
suelos profundos, húmedos, bien drenados, con to- en la época seca del año, la que puede durar entre
pografía accidentada, los bosques de pinos son más seis y siete meses, renovándolas en la primavera,
altos y frondosos. Éstos pueden estar constituidos por lo que su apariencia contrasta notablemente
por Pinus devoniana (escobetón u ocote), P. teocote entre la temporada seca y la de lluvias. En ellos
(ocote), P. durangensis y P. pseudostrobus, que llegan casi siempre están presentes árboles con troncos
a formar agrupaciones densas de hasta 30 m de lisos o de corteza brillante que se desprende en

34 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 11. Bosque de pino piñonero (Pinus cembroides) sobre laderas de rocas calizas, cerca de El Durazno, muni-
cipio de Atarjea, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Figura 12. Bosque de pino piñonero (Pinus cembroides) sobre laderas de rocas calizas, cerca de El Durazno, mu-
nicipio de Atarjea, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Ecosistemas | 35
Capítulo

Figura 13. Bosque de pino con Pinus devoniana y P. teocote, sobre cerros de rocas ígneas cerca de Joya Fría, mu-
nicipio de Victoria, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Figura 14. Bosque de pino con Pinus devoniana y P. teocote en el Derramadero, municipio de Victoria, Guanajuato
(fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

36 | La Biodiversidad en Guanajuato
capas delgadas y una o varias especies espinosas. componentes son el palo dulce (Lysiloma micro-
Esta comunidad se encuentra distribuida desde el phyllum), palo blanco (Albizia plurijuga), copal
nivel del mar hasta 2 200 msnm, en regiones con (Bursera cuneata), ceiba o pochote (Ceiba aesculi-
temperatura media anual de entre 20 y 29 ºC, en folia), cazahuate o palo bobo (Ipomoea murucoi-
donde la temperatura mínima extrema no des- des), huizache (Acacia farnesiana y A. schaffneri),
ciende de 0 ºC, por lo que en general no ocurren tepame (Acacia pennatula), cuajiote (Bursera
heladas; la precipitación es baja, entre 300 y 1 800 fagaroides), nopal cardón (Opuntia streptacantha),
mm (más frecuentemente entre 600 y 1 200 mm) Heliocarpus terebinthinaceus, garambullo (Myrti-
y su distribución se concentra en una parte del llocactus geometrizans), Pistacia mexicana, Ehretia
año, dividiéndolo en dos estaciones bien marcadas, latifolia, Euphorbia fulva, Agonandra racemosa,
una lluviosa y la otra seca (Rzedowski, 1978). Casimiroa edulis, palma china (Yucca filifera). En
En Guanajuato el bosque tropical caducifolio el estrato arbustivo se encuentran: Calliandra
originalmente se extendía ampliamente en la por- humilis, Eysenhardtia polystachya (palo dulce),
ción sur del estado, en la provincia fisiográfica del Erythrina coralloides, Condalia velutina, Senna
Eje Neovolcánico, y ocupaba laderas de cerros y floribunda, S. polyantha, Parkinsonia aculeata,
barrancas de la parte baja de la cuenca del río Prosopis laevigata, Mimosa aculeaticarpa y Verbe-
Lerma, entre 1 650 y 2 200 m de altitud. Este tipo sina sphaerocephala (Rzedowski y Calderón de
de vegetación cubría aproximadamente 45% de la Rzedowski, 1987).
superficie del estado; sin embargo, actualmente Entre las epífitas, la más frecuente es Ti-
ocupa menos de 10% del área total de la entidad. llandsia recurvata, que a veces cubre densa-
Son comunidades boscosas densas en las que mente las ramas de los árboles, pero también se
el estrato arbóreo puede alcanzar hasta 12 m de encuentran otras especies de Tillandsia de ma-
altura, es muy diverso y por lo mismo no presen- yor tamaño, como T. achyrostachys, T. bourgaei,
ta una sola especie dominante, los principales T. makoyama y T. plumosa, que a veces son

Figura 15. Bosque de oyamel (Abies religiosa) sobre rocas ígneas en la cima del cerro Zamorano (fotografía de
Sergio Zamudio Ruiz).

Ecosistemas | 37
Capítulo

7 abundantes localmente. De las plantas hemipa- Cuando el bosque tropical caducifolio es some-
rásitas destacan localmente Phoradendron car- tido a perturbaciones periódicas y constantes, ya
neum (sobre Ipomoea), P. forestierae (sobre sea por influencia de las prácticas agrícolas o por
Forestiera) y Psyttacanthus palmeri (sobre Bur- la ganadería, y se deja temporalmente en reposo,
sera). Las trepadoras leñosas son escasas y es- se desarrolla un matorral secundario que fue de-
tán representadas por especies de los géneros nominado matorral subtropical por Rzedowski y
Canavalia, Cissus, Clematis, Gaudichaudia, He- McVaugh (1966). Es una comunidad dominada
teropteris, Iresine, Matelea, Nissolia, Pisoniella principalmente por especies arbustivas de hasta 5
y Serjania (Rzedowski y Calderón de Rzedowski, m de alto, entre la que crecen algunos árboles
1987) (figuras 16 y 17). aislados; las especies más características de este
Este tipo de vegetación estaba ampliamente matorral son: cazahuate o palo bobo (Ipomoea
distribuido en el estado, sobre todo en la región murucoides), los huizaches o tepames (Acacia far-
del Bajío, pero la constante ampliación de las nesiana y Acacia pennatula), los nopales (Opuntia
parcelas agrícolas, así como la apertura de tie- spp.), el palo dulce (Eysenhardtia polystachya), el
rras para agostaderos, lo han desplazado de los acebuche (Forestiera phillyreoides) y el palo prieto
terrenos planos en los que originalmente crecían, o tepehuaje (Lysiloma microphyllum) (Rubio, 1983;
y ahora se encuentra muy fragmentado en loca- Rzedowski y Calderón de Rzedowski, 1987).
lidades aisladas o se ha convertido en vegetación Rzedowski y Calderón de Rzedowski (1987),
secundaria. Se piensa que, antes del desarrollo de afirman que este bosque corre el riesgo de des-
la agricultura, en los terrenos planos con suelo aparecer por completo del estado y es posible
profundo del fondo de los valles del Bajío se en- que algunos de sus elementos ya se hayan per-
contraban mezquitales bien desarrollados, sin dido. Reconocen que las siguientes especies es-
embargo, en la actualidad esta asociación vegetal tán particularmente amenazadas por ser plantas
ya no se observa. raras y de distribución geográfica restringida:

Figura 16. Bosque tropical caducifolio durante la época de lluvias sobre laderas de rocas ígneas al norte de León,
Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

38 | La Biodiversidad en Guanajuato
de gramíneas para formar potreros o agostade- medad atmosférica. La temperatura media anual
ros para el ganado. También pueden originarse varía de 12 a 23 ºC y en general se presentan
como consecuencia del desmonte de cualquier heladas en los meses más fríos, aunque en alti-
tipo de vegetación para ser cultivado por varios tudes inferiores éstas suelen ser esporádicas. El
años, seguido del abandono de las parcelas agrí- clima más característico de esta formación per-
colas que son sometidas a un fuerte pastoreo y tenece al tipo Cf de la clasificación de Koeppen
al uso frecuente de fuego para propiciar el re- (1948), pero en algunas partes el bosque prospe-
brote de los pastos. ra en condiciones catalogadas como Af, Am, e
En la Sierra de los Agustinos, se describen incluso, Aw y Cw (Rzedowski, 1978).
algunos pastizales secundarios que se encuen- Aunque en Guanajuato no existen áreas ex-
tran en lugares abiertos entre los bosques de en- tensas con este tipo de vegetación, algunos ele-
cinos, entre 2 400 y 2 800 msnm. Las principales mentos de esta comunidad se intercalan en
especies que los forman son: Aegopogon cen- encinares y pinares húmedos en el noreste del
chroides, A. tenellus, Andropogon barbinodis, estado. Sobresalen especies como: aguacatillo
Bouteloua repens, B. curtipendula, Eragrostis loco (Ilex rubra), pasilla blanco (Cornus disciflo-
mexicana, Festuca myurus, Hilaria cenchroides, ra), mimbre blanco (Cornus excelsa), aguacatillo
Muhlenbergia macroura, Paspalum plicatum, (Cinnamomum pachypodum), Garrya laurifolia,
Rhynchelytrum roseum, Setaria geniculata, Spo- nogalillo (Carya ovata var. mexicana), encino es-
robolus indicus, Stipa mucronata. En esta misma cobillo (Quercus affinis) y varios más (Rzedows-
localidad, a partir de 2 800 m se encuentra un ki, Calderón de Rzedowski y Galván, 1996). Se
zacatal amacollado de Muhlenbergia macroura, encuentran en las cercanías de Mesas de Jesús,
Setaria geniculata y Stipa mucronata, asociado a municipio de San Luis de la Paz y en los alrede-
los bosques de pino-encino (Rubio, 1993). dores de La Joya Fría, municipio de Victoria.

Bosque mesófilo de montaña Bosque de galería

El bosque mesófilo de montaña ocupa sitios más Son comunidades de árboles que se distribuyen
húmedos que los típicos de los bosques de Quercus en una franja delgada a lo largo de los ríos o
y de Pinus, aunque generalmente más cálidos que arroyos, sobre todo en los que la corriente es
los del bosque de Abies, pero más frescos que los perenne, son frecuentes en estos bosques los
que condicionan la existencia de los bosques tro- sauces (Salix humboldtiana y S. bonplandiana),
picales. Las condiciones climáticas que requiere sabino (Taxodium mucronatum), fresno (Fraxi-
este tipo de vegetación se presentan en zonas muy nus uhdei), aile (Alnus spp.) y el álamo o haya
restringidas del territorio de la República Mexi- (Platanus mexicana). Dependiendo de la espe-
cana y, por consiguiente, el bosque mesófilo de cie dominante, la altura de los árboles puede
montaña tiene una distribución limitada y frag- variar de 12 a 30 m. Los bosques de Taxodium
mentaria a lo largo de la vertiente este de la Sie- mucronatun que corren a lo largo del río Tigre,
rra Madre Oriental, desde el suroeste de Tamau- desde Jerécuaro a Coroneo; en Las Musas, sobre
lipas hasta el norte de Oaxaca, incluyendo el río Turbio en el municipio de Manuel Dobla-
porciones de San Luis Potosí, Hidalgo, Puebla y do, o en diferentes porciones a lo largo del río
Veracruz. El límite altitudinal inferior se sitúa Lerma y sus tributarios, son muy vistosos (figu-
alrededor de 600 msnm, y el límite superior se ras 27 y 28).
establece en los 2 700 msnm; más arriba suele
sustituirlo el bosque de Abies. La precipitación Vegetación acuática y subacuática
media anual es superior a 1 000 mm, comúnmen-
te pasa de 1 500 mm y en algunas zonas excede Son comunidades de plantas herbáceas que se
los 3 000 mm. El número de meses secos varía de desarrollan en la orilla o dentro de los cuerpos
cero a cuatro. Una característica de estos sitios de agua, ya sean permanentes o temporales. El
es la frecuente neblina y la consiguiente alta hu- mayor cuerpo de agua del estado en donde se

Ecosistemas | 49
Capítulo

7 desarrolla esta vegetación es la laguna de Yuriria. rio acuático (Eichhornia crassipes), hidrófita
La vegetación característica de la orilla es deno- libremente flotadora que cubre hasta 60% de la
minada localmente tular, se desarrolla desde los superficie lagunar, formando manchones bas-
márgenes de la laguna hasta los 2 m de profun- tante extensos, principalmente hacia la parte
didad, los elementos dominantes son Typha do- noroeste. Diversas especies se asocian a las islas
mingensis y Scirpus californicus, plantas peren- o manchones de lirio; son organismos que apro-
nes de hasta 2 m de altura que se arraigan en el vechan como sustrato tanto los restos vegetales
fondo lodoso y sus tallos sobresalen de la super- que quedan atrapados, como a las mismas plan-
ficie del agua y crecen en poblaciones muy den- tas vivas del lirio, entretejiéndose y formando
sas. Esta comunidad cubre amplias extensiones una maraña de tallos, raíces, hojas y restos ve-
en la parte sur y sureste de la laguna, formando getales; las especies que se encontraron en estas
manchones dispersos que pueden alcanzar varios condiciones son: Berula erecta, Cyperus articu-
kilómetros cuadrados, pero está más extendida latus, C. esculentus, Lemna gibba, L. minuscula,
en las porciones norte y noreste. Otros elementos Phragmites australis, Pistia stratiotes, Polygo-
como Berula erecta, Cyperus articulatus, C. es- num mexicanum, P. punctatum, Utricularia gib-
culentus, Echinocloa spp., Eleocharis macrosta- ba, Wolffiella lingulata y Rumex sp. Como las
chya, Phragmites australis, Pistia stratiotes, Po- plantas flotan libremente, su distribución suele
lygonum mexicanum, P. punctatum, Sagitaria cambiar de un día para otro de acuerdo con la
longiloba, Scirpus cubensis, Eclipta prostrata y dirección del viento.
Rumex sp., se distribuyen formando pequeños Otras hidrófitas flotadoras bien representadas,
manchones entre el tular y en ocasiones en la aunque en menor proporción son: Azolla sp., Lem-
orilla de la laguna (Ramos y Novelo, 1993). na gibba, L. minuscula, Pistia stratiotes y Wolffiella
Como vegetación característica de la laguna lingulata, que se encuentran principalmente en los
también se puede considerar la que forma el li- márgenes de la laguna o en áreas abiertas del tu-

Figura 27. Vista panorámica del bosque ripario de sabino (Taxodium mucronatum), en las márgenes del río Tigre,
cerca de Jerécuaro, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

50 | La Biodiversidad en Guanajuato
Figura 28. Bosque ripario de sabino (Taxodium mucronatum) en la orilla del río Tigre, Jerécuaro, Guanajuato (fo-
tografía de Sergio Zamudio Ruiz).

lar. Las hidrófitas enraizadas de hojas flotantes punctatum, Rorippa nasturtium-aquaticum, Sa-
son las menos abundantes, entre éstas destacan gitaria longiloba y Tridax coronopifolia. La ma-
Hydrocotyle ranunculoides y Nymphoides fallax yoría de estos elementos forman pequeñas
que se encuentran asociadas a los tulares, así agrupaciones en los márgenes de la laguna, en
como Nymphaea gracilis que crece en áreas abier- las áreas donde el nivel del agua no es mayor de
tas. Por último, las hidrófitas enraizadas sumergi- 60 cm (Ramos y Novelo, 1993).
das están representadas por Myriophyllum En la actualidad la laguna de Yuriria sufre
aquaticum, Potamogeton pectinatus y Utricularia el fuerte impacto de los asentamientos huma-
gibba. Las dos primeras crecen en lugares abiertos nos, debido al aporte de sedimentos provenien-
y más profundos de la laguna, mientras que la tes de los diversos afluentes, tanto naturales
última se desarrolla en sitios de poca profundidad como artificiales, que llegan a la cuenca, lo que
y comúnmente entre las raíces entretejidas del li- ha ocasionado un desequilibrio hidrológico de
rio (Ramos y Novelo, 1993). la cuenca con la consecuente pérdida de profun-
Una comunidad distinta es la que se localiza didad y extensión de las zonas inundadas. Tam-
en el Embarcadero (el arroyo) y la Ciénega, que bién afecta el elevado contenido de nutrientes y
está constituida por diversas especies de plantas contaminantes que son vertidos por el drenaje
herbáceas acuáticas, subacuáticas y tolerantes a de las poblaciones de Yuriria, Uriangato y Mo-
la alta humedad, que no rebasan los 60 cm de roleón, así como por el río Lerma y las zonas
altura y que difieren de las que están asociadas agrícolas de la Ciénega y sus alrededores. Como
al tular y al lirio, como: Eclipta prostrata, Con- consecuencia de la alteración de este hábitat y
yza canadensis, Commelina diffusa, Cynodon la concentración de nutrientes surgió el desa-
dactylon, Cyperus imbricatus, C. laevigatus, C. rrollo acelerado del lirio acuático, que cubre
odoratus, Eleocharis densa, Datura ceratocaula, una gran proporción de la superficie lacustre,
Guilleminea densa, Hydrocotyle ranunculoides, problema que impide la pesca y desalienta las
Ludwigia peploides, Nymphoides fallax, Paspa- actividades recreativas. De continuar esta ten-
lum dissectum, Polygonum mexicanum, P. dencia es posible que en pocos años se aprecie

Ecosistemas | 51
Capítulo

7 una significativa disminución de este cuerpo de tribución originales se habían reducido paulati-
agua (Ramos y Novelo, 1993). namente, observándose a menudo en algunos
Durante la temporada de lluvias se forman sitios sólo restos de la vegetación original, sobre
numerosos charcos temporales y lagunetas que todo en áreas hoy utilizadas extensivamente con
se encuentran dispersos por todo el estado, en fines agrícolas, y señala que las comunidades ve-
ellos se desarrolla una variedad de plantas acuá- getales más afectadas son los mezquitales y di-
ticas herbáceas; algunas arraigadas con tallos versos tipos de matorrales crasicaules que casi han
erectos que sobresalen del agua y crecen en las desaparecido para beneficio de la agricultura. Por
partes más someras, como Cyperus niger, C. ses- su parte Rzedowski y Calderón de Rzedowski (1987),
lerioides, Eleocharis acicularis, E. macrostachya, afirman que el bosque tropical caducifolio del Ba-
Lilaea scilloides, Limosella aquatica, Polygonum jío corre el riesgo de desaparecer por completo del
mexicanum, Saggitaria longifolia; otras arraiga- estado y es muy probable que algunos de sus ele-
das con hojas que flotan habitan las partes más mentos ya se hayan perdido.
profundas, como Heteranthera peduncularis, Jae- Al comparar la superficie actualmente ocu-
geria glabra, Ludwigia peploides, Marsilea sp., pada por cada tipo de vegetación con la que
Nymphoides fallax, Potamogeton diversifolius, debió haber cubierto, de acuerdo con el mapa de
Utricularia perversa; y entre las acuáticas flota- vegetación potencial, se puede observar que
doras se encuentran Azoolla sp., Lemna gibba y efectivamente la superficie originalmente cu-
Wolffiella lingulata. bierta por todos los tipos de vegetación se ha
Gutiérrez-Gallegos (2004) cita para el munici- reducido en el estado en un porcentaje cercano
pio de San José Iturbide la presencia de vegetación a 66%; siendo el bosque tropical caducifolio el
acuática restringida a pequeñas represas, arroyos más afectado, ya que se estima que su área ori-
temporales y charcos. La diversidad vegetal que ginal cubría 45.22% de la superficie del estado
presenta este tipo de comunidades no es muy y actualmente sólo se conserva en 8.32% del
grande y está representada por especies flotantes territorio. Otros tipos de vegetación en los que
como Lemna gibba; otras arraigadas al suelo como su área original se ha reducido considerable-
Callitriche heterophylla, Ludwigia peploides, mente son el bosque de Quercus, el matorral
Schoenoplecton californicus y en las zonas menos xerófilo y el pastizal natural, en los que la ex-
profundas Cyperus niger, Juncus effusus, Planta- tensión original se ha reducido en más de 50%.
go major, Polygonum mexicanum y Rumex crispus. Contrasta, en cambio, el hecho de que la super-
También es posible encontrar especies de plantas ficie ocupada por los bosques de Abies y Pinus
herbáceas que se desarrollan en suelos húmedos a se ha reducido muy poco, lo que se puede expli-
la orilla de arroyos, zonas encharcadas o panta- car debido a que estas comunidades se encuen-
nosas, tales como: Allium glandulosum, Artemisia tran en sitios poco accesibles y alejados de las
ludoviciana, Bidens aurea, Cyperus niger, C. ses- poblaciones importantes (cuadro 1).
lerioides, C. spectabilis, Datura ceratocaula, Dias-
tatea tenera, Eryngium carlinae, E. heterophyllum, Conclusión
E. serratum, Helenium mexicanum, Heleocharis
acicularis, H. bonariensis, Hybridella globosa, Se debe enfatizar, sin embargo, que todas las
Juncus aemulans, J. effusus, J. tenuis, Polygonum comunidades vegetales del estado se encuentran
mexicanum, Ruellia lactea, Rumex crispus, entre profundamente alteradas como consecuencia de
otras (figuras 29 y 30). las actividades humanas y que el proceso de
deterioro continúa, por lo que su situación pue-
Destrucción de la vegetación de empeorar en el futuro inmediato. Se debe
tener en cuenta también que en muchos sitios la
En 1978, Pineda mencionó que todas las comuni- eliminación de la cubierta vegetal ha desenca-
dades vegetales del estado habían sufrido cambios denado la ocurrencia de severos procesos de
profundos en su estructura, composición florísti- erosión y degradación del suelo, que no han sido
ca y fisonomía, además de que sus áreas de dis- evaluados adecuadamente y en consecuencia no

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Figura 29. Vegetación acuática en un bordo cerca de San Felipe, Guanajuato, con Polygonum mexicanum (de color
rosa) y Cyperus spp., cerca de San Felipe, Guanajuato (fotografía de Sergio Zamudio Ruiz).

Figura 30. Vegetación acuática en un charco o bordo con Olivaea tricuspis de flores amarillas y Polygonum mexi-
canum de flores rosas, cerca de San Pedro Almoloyan, municipio de San Felipe, Guanajuato (fotografía de Sergio
Zamudio Ruiz).

Ecosistemas | 53
Capítulo

7 se han tomado las medidas necesarias para evi- estado; con el fin de que se tomen medidas para
tar su avance o reducir su extensión. proteger la vegetación de las áreas mejor con-
Ante este panorama es urgente que se realice servadas, propiciar la revegetación (o restaura-
un diagnóstico detallado de las áreas suscepti- ción) de muchas áreas deforestadas y para
bles de conservar y del grado de erosión en el detener la erosión.

Cuadro 1. Cambios en la superficie ocupada por las comunidades vegetales del estado de
Guanajuato al comparar el mapa de vegetación potencial con el mapa de vegetación actual.

Tipo de vegetación Potencial (ha) % Actual (ha) %

Bosque de Abies 920.139 0.03 920.139 0.03


Bosque de Quercus 607 061.642 19.94 295 747.979 9.71
Bosque de Pinus 181 190.686 5.95 154 506.658 5.07
Bosque Tropical Caducifolio 1 376 834.512 45.22 253 498.268 8.32
Matorral Xerófilo 693 554.698 22.78 236 322.344 7.76
Pastizal 185 024.598 6.08 97 841.437 3.21
Total 3 044 586.275 100.00 1 548 287.062 34.10

Fuente: datos de Sergio Zamudio Ruiz y Carlos Alberto Ramírez Sosa con base en iee, 2009 e Inegi, 1993.

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