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1. Resumen
2. Introducción
3. Desarrollo
4. Desarrollo
5. Cuadro clínico
6. Factores de riesgo
7. Diagnóstico
8. Tratamiento
9. Conclusiones
10. Bibliografía
Resumen
En los últimos años pocas entidades han condicionado problemas de salud equiparable al
del Asma Bronquial. Es un síndrome que incluye diversos fenotipos que comparten
manifestaciones clínicas similares pero de etiologías diferentes. Tiene una elevada
prevalencia, cronicidad en su evolución y variabilidad, no solo entre diferentes pacientes,
sino también en un mismo individuo. Se define como una alteración inflamatoria crónica de
las vías aéreas y afecta del 3 al 7% de la población adulta, siendo más frecuente en edades
infantiles y está dada por estímulos del medio ambiente que proporcionan una hiper
respuesta de la vía aérea lo que conduce a una hiper reactividad bronquial que provoca
exceso en la producción de moco en la traquea y bronquios ocasionando obstrucción y
contracción exagerada del músculo liso bronquial que provoca bronco espasmo.
Se concluyó que los síntomas principales son disnea, tos y opresión torácica que se
complementan en período de crisis con distensión torácica, sonoridad aumentada y
estertores espiratorios sibilantes difusos pudiendo encontrarse otros signos como cianosis,
taquicardia, taquipnea y sudoración que son elementos de gravedad y agudización. Entre
sus Factores de riesgo se encuentran los dependientes del huésped y los ambientales y
el Diagnóstico se fundamenta en la historia clínica, datos de exploración funcional
respiratoria e información de pruebas cutáneas alérgicas. El tratamiento básico se divide en
dos grandes grupos, aliviadores o broncodilatadores y los preventivos o controladores.
Introducción
En los últimos años pocas entidades han condicionado un problema de salud
pública equiparable al del Asma Bronquial.
El asma es un síndrome que incluye diversos fenotipos que comparten manifestaciones
clínicas similares pero de etiologías probablemente diferentes. Ello condiciona la propuesta
de una definición precisa; las habitualmente utilizadas
son meramente descriptivas de sus características clínicas y fisiopatológicas. Desde un
punto de vista pragmático se podría definir como una enfermedad inflamatoria crónica de
las vías respiratorias, en cuya patogenia intervienen diversas células y mediadores de
la inflamación, condicionada en parte por factores genéticos y que cursa con hiperrespuesta
bronquial y una obstrucción variable al flujo aéreo, total o parcialmente reversible, ya sea
por la acción medicamentosa o espontáneamente.
Es una entidad que tiene una elevada prevalencia, cronicidad en su evolución y gran
variabilidad, no solo entre diferentes pacientes, sino también en un mismo individuo, por
cuanto es una patología que requiere asistencia médica continuada, para ofrecer un
tratamiento y seguimiento adecuado a los pacientes.
Según datos publicados por la Organización Mundial de la Salud, se estima que a nivel
mundial el Asma Bronquial pudiera estar afectando entre 100 y 150 millones de personas y
ocasionando una mortalidad anual a 2 millones de ellas.
En Europa encontramos una prevalencia de asma de un 8%, un 5% en Irlanda, un 2%
en Grecia, mientras que en Australia y Nueva Zelanda esta cifra alcanza el 11% ().
En España existe un 3,5% en Barcelona (3) mientras que en Cuba es de 8,2 %.
Desarrollo
Se define el Asma Bronquial como una alteración inflamatoria crónica de las vías aéreas, en
la que participan diferentes células o productos celulares en especial mastocitos, eosinófilos
y linfocitos T, que se caracteriza fundamentalmente por Obstrucción e Inflamación de la vía
aérea e Hiperreactividad bronquial que en los individuos susceptibles, esta inflamación es
capaz de producir episodios recurrentes de sibilancias disnea, opresión torácica y tos,
particularmente de noche.
Clasificación:
Intermitente 1 V/ semana
Persistente severa o
Diaria, limita la actividad física
Grave.
Asma bronquial
Enviado por CARLOS EYZAGUIRRE
1. Definición
2. Síntomas
3. Estudios
4. Diagnóstico
5. Manejo del asma crónica
6. Manejo del asma aguda
Definición
Es UNA ENFERMEDAD INFLAMATORIA CRONICA de las vías aéreas en la cual,
muchas células como mastocitos y eosinófilos juegan un papel importante. Puede presentar
obstrucción al flujo aéreo que cede espontáneamente o con tratamiento y se acompaña de
hiperreactividad bronquial.
Síntomas
Tos
Silbidos
Dificultad Respiratoria
Opresión Torácica
Condiciones asociadas: Rinitis, sinusitis, etc.
Forma de los Síntomas:
Estacionales, continuos o episódicos. Comienzo, duración, Frecuencia, Variaciones diarias y
nocturnas (Entre la 01 h y 05 h pensar en Reflujo GE)
Impacto de la Enfermedad:
Número de consultas a la guardia. N* de internaciones. N*de intubaciones (UTI). Pérdida
de días laborales o escuela.
Estudios
ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS:
Citológico
Rx de Tórax
Exámen de Esputo
Estudio de Reflujo GE
Estudio de vías respiratorias altas
ESTUDIOS FUNCIONALES:
Espirometría
PFE (Pico de Flujo)
Curva Flujo-Volumen
TEST DE PROVOCACION: Meticolina- Alergenos ocupacionales
Diagnóstico
ESPIROMETRÍA
A) OBSTRUCCION: DA DIAGNOSTICO DE ASMA
B) SIN OBSTRUCCION: Se hace MONITOREO de pico de flujo durante 2-3 semanas a la
mañana, tarde y noche:
Alterado:
con coeficiente de fluctuación mayor del 20 %, da diagnóstico de asma.
Normal:
cuando el coeficiente de fluctuación es menor de 10 %. Se hace el:
TEST DE PROVOCACION BRONQUIAL:
Ejercicio
Aire frío
Histamina
METICOLINA por nebulización
Alergenos esperados
Si el test es positivo y hay Historia Clínica compatible (+) = ASMA
Si es negativo y Hay Historia Clínica compatible con asma: hacer Diagnostico
Diferencial con otras enfermedades de clínica similar.
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1. Introducción
2. Desarrollo
3. Conclusiones
4. Bibliografía
Introducción
Mucho antes de nuestra era grandes maestros de la medicina señalaron la importancia
del aire para la vida y enunciaron los rudimentos de la fisiologíapulmonar.
El asma bronquial (AB) ha ocupado ininterrumpidamente la atención médica desde la
antigüedad (460-130 a.n.e.), fue referida por Hipócrates, Galeno y Areteo de Capadocia.
Celso (30 a.n.e.), dio tal nombre a la "falta de aire moderada" que presentaban los soldados
al realizar ejercicios. (1-2)
Hasta el presente, esta condición respiratoria despierta el mayor interés en todo el mundo,
a pesar de que la ausencia de una definición precisa de la enfermedad es uno de
los problemas mayores en el estudio y atención a los pacientes que la sufren. (3-5)
La prevalencia en nuestro país es del 8,2% ligeramente superior en el sexo femenino y en
individuos de zonas urbanas; se observan valores superiores a la media nacional en zonas
marítimas y en zonas montañosas.
La enfermedad aparece a cualquier edad, pero es más frecuente en los primeros años de la
vida. En la mitad de los casos comienza antes de los 10 años y una tercera parte antes de los
40. Previo a la adolescencia se presenta con mayor frecuencia en el sexo masculino, en una
proporción de 2:1 que se iguala a los 30 años. Es la enfermedad crónica más común en
los niños y una de las más comunes en adultos (18)
Por ello se realizó una revisión bibliográfica sobre el Asma Bronquial en nuestro país, con
el objetivo de profundizar en el tema, la definición y las clasificaciones de la enfermedad,
los factores ambientales que influyen en la misma, así como su tratamiento, la educación y
las medidas de controlambiental que deben ser aplicadas por los pacientes asmáticos.
Desarrollo
Definiciones operacionales:
La definición de asma bronquial ha sido y seguirá siendo controversial. (6)
Tal dificultad se eleva a la máxima categoría cuando se sabe que el primer agente causal
sigue siendo desconocido, la anatomía patológica es de difícil obtención y las
manifestaciones clínicas son variables y no pocas veces atípicas, lo que precisamente sucede
en el asma. Tales condiciones fueron resumidas magistralmente al señalarse que "el asma
bronquial es una enfermedad, en general, fácil de reconocer pero difícil de definir". (3-5)
Los fisiólogos utilizan una definición basada en la variabilidad y reversibilidad de la
obstrucción del flujo aéreo. Los patólogos han contribuido con valiosos elementos extraídos
de los estudios post mortem y más reciente las biopsias broncopulmonares, han
brindado información esencial acerca del componente inflamatorio de la obstrucción de las
vías aéreas. Los inmunólogos y los alergistas, al estudiar la patogénesis del asma alérgica
IgE-mediada, han explicado los mecanismos causantes de los cambios agudos del calibre de
las vías aéreas, la hiperrespuesta y la inflamación de la mucosa bronquial y, con
características especiales, la descamación crónica de la bronquitis eosinofílica. Los clínicos
han logrado integrar estas definiciones y llevarlas a la práctica diaria. (6)
El Proyecto Internacional del Asma, teniendo presente las distintas perspectivas, las reunió
en una definición operacional: "es un desorden inflamatorio crónico de las vías aéreas, en el
cual muchas células desempeñan su papel, incluyendo los mastocitos y los eosinófilos. En
individuos susceptibles, esta inflamación causa síntomas, los cuales están comúnmente
asociados a una obstrucción amplia, pero variable, del flujo aéreo, que es con frecuencia
reversible espontáneamente o como consecuencia de un tratamiento y causa un incremento
asociado en la reactividad de la vía aérea ante una amplia variedad de estímulos."(7)
Esta inflamación produce episodios recurrentes de sibilancias, disnea, opresión torácica y
tos, en particular de noche y de madrugada.
Clasificación de la enfermedad:
Desde el punto de vista etiológico esta es una enfermedad heterogénea por lo que es útil
clasificarla con un enfoque clínico-espirométrico, epidemiológico y social.
Según su origen:
Asma extrínseca o atópica. Con frecuencia se asocia a una historia personal o familiar
de enfermedades atópicas, o sea, es desencadenada por alérgenos externos. Es frecuente
en la infancia y juventud. Existe incremento de los niveles séricos de IgE o de la IgG1 e
IgG4, reacción positiva a las pruebas de estimulación mediante la inhalación
del antígeno específico.
Asma intrínseca o idiosincrática. La padecen aquellos pacientes que presentan historia
atópica negativa y no reaccionan a las pruebas cutáneas o de broncoprovocación con
alérgenos específicos. Presentan concentraciones séricas normales de IgE y, por tanto,
no pueden clasificarse según los mecanismos inmunológicos definidos. Si podemos decir
que está menos relacionada con la herencia y se presenta con frecuencia después de una
infección de las vías respiratorias altas, es decir, tiende a tener causas no alérgicas o
mixtas.
Por grados: (Clasificación no aceptada internacionalmente, tiene una importancia relativa).
Grado I: Menos de 6 ataques al año; por lo general las crisis no son grandes, con menos de
12h de duración, disnea a los grandes esfuerzos sin otros síntomas de insuficiencia
respiratoria, son síntomas ligeros en períodos intercrisis.
Grado II: De 6 a 9 ataques al año; crisis ligeras o moderadas, a veces se prolongan más de
12h, disnea, grandes esfuerzos sin otros síntomas de insuficiencia respiratoria, con
síntomas ligeros en períodos intercrisis.
Grado III: De 10 o más ataques al año; asma crónica o un estatus asmático en el último año;
crisis moderadas y severas, casi siempre con más de 12h de duración y a veces por varios
días, disnea a medianos y grandes esfuerzos con otros síntomas en periodo intercrisis.
Los pacientes son esteroideo dependientes y pueden presentar otros procesos asociados,
por ejemplo: efisema o bronquitis. (18)
Asma intrínseca subclínica
El diagnóstico se establece cuando se presenta el paciente con una afección alérgica distinta
al AB (habitualmente rinopatía), el cual no presenta manifestaciones subjetivas al examen
físico, que permitan sospechar la existencia de afección bronquial, pero al realizarle
espirometría se puede demostrar la presencia de una disfunción ventilatoria obstructiva. (8,
9, 10, 12-16)
Factores Ambientales:
Aún cuando el asma ha sido reconocida desde la antigüedad, sólo hasta hace muy
poco tiempo se aceptó que, aunque los factores genéticos son importantes para determinar
la propensión de una persona a desarrollar asma, es la interacción de esos factores con los
elementos ambientales la que determina la prevalencia real de la enfermedad. (11)
Estos factores ambientales incluyen: un estilo de vida "occidental" en los hábitos dietéticos
(dietas refinadas, abundantes en sal y ricas en grasas, particularmente los ácidos grasos
omega-6), la pobre ingestión de frutas frescas y vegetales, la exposición temprana a los
aeroalérgenos, el hábito de fumar, el tabaquismo materno, los patrones de infecciones
víricas durante la niñez y la contaminación ambiental (dentro y fuera de la casa). Muchas
de estas consideraciones se basan en la observación de que el asma es rara en los países
desarrollados y menos común en las áreas rurales respecto a los distritos urbanos, lo cual
permite especular que el AB parece tener una mayor prevalencia poblacional en relación
con factores del medioambiente. (11)
Tratamiento:
El asma requiere un tratamiento mantenido, a menudo durante muchos años, o incluso
durante toda la vida. Esto plantea cuestiones familiares,
cumplimiento, organización, costo y manejo de los recursos, al igual que ocurre con otras
enfermedades crónicas. Evitar la exposición a aquellos factores que se sepan asociados a un
caso particular puede ayudar a prevenir o a reducir los síntomas. El tratamiento consiste en
el empleo de broncodilatadores para aliviar la limitación al flujo aéreo y mediante
antinflamatorios para controlar la enfermedad. Un tratamiento con buena relación costo-
beneficio será siempre el tratamiento de elección. (18)
A las formas no tan recientes de los agentes profilácticos, entre estos el cromoglicato de
sodio (cromolín), hoy se han agregado medicamentos más selectivos, como los
simpaticomiméticos de acción más prolongada, con muy pocos efectos colaterales y los
glucocorticoides inhalados, que de hecho se han convertido en armas de primera línea por
aceptación universal. Se han logrado formas farmacéuticas ventajosas, como la aminofilina
en tabletas de acción prolongada y la posibilidad de determinar su concentración en sangre.
El empleo de medicamentos en polvo para aspiración directa, compensa algunas
limitaciones casuísticas de otras formas de presentación. La tendencia a preferir la vía
respiratoria por inhalación como método de administración de medicamentos, es un hecho
consumado frente a tradicionales vías como la intravenosa, la oral y la rectal; incluso,
resulta muy efectiva en situaciones agudas como en las crisis de asma bronquial. Tal es el
caso del salbutamol nebulizado, que se ha mostrado que es tan efectivo por vía respiratoria
como por vía intravenosa.
Tener en cuenta las características de cada uno de estos medicamentos, es tan importante
como buscar la mejor combinación de estos (muy particular para cada paciente) y conocer
profundamente los efectos colaterales, antagonismos, sinergismos y contraindicaciones.
Los medicamentos que se disponen han sido adecuados a los factores fisiopatogénicos. Esto
enseña que su prescripción debe responder al evento que presenta el paciente en un
momento determinado, teniendo en cuenta qué tipo de asma en tiempo real presenta, de
qué intensidad es actualmente, qué factores están condicionando el episodio, qué
complicaciones asociadas presenta, qué limitaciones impone el estado particular general
de salud del paciente, en fin, qué tolerancia a mostrado al producto seleccionado. (17)
Educación:
En nuestro país, el equipo de atención primaria de salud, con su médico y enfermera
de familia es el que debe asumir esta tarea, que a la luz de los datosmás recientes tiene una
importancia comprobada en la reducción de las crisis y la mortalidad.
Los factores siguientes son los más importantes a la hora de plantearnos el control de
inductores y desencadenantes del asma:
Control Ambiental.
Alérgenos domésticos:
Ácaros: Es importante tratar de disminuir la población de ácaros en el ambiente, para ello
lo más efectivo es el lavado de la ropa de cama a 600 C de temperatura, con frecuencia
semanal y posterior secado al sol durante 4 horas. También son útiles las fundas de cama
impermeables y el uso de aspiradoras con filtro antiácaros, así como retirar las alfombras,
almohadas y cortinas. No está demostrado que el uso de acaricida sea útil en estos
momentos. Se recomienda lavar las cortinas con frecuencia y evitar en lo posible
los juguetes de peluche, en caso de tenerlos, lavarlos con agua caliente semanalmente.
Animales domésticos: Es aconsejable que en los casos de los asmáticos no
haya animales potencialmente sensibilizadores como: gatos, perro y aves.
Cucarachas: Deben ser combatidas con limpieza a fondo y desinfectación.
Hongos: Constituye un problema importante. En nuestro medio, en algunos casos se
precisa aire acondicionado y vigilar siempre la posible contaminación de los filtros, lo que
ampliaría el problema.
Tabaquismo: Evitar tanto el activo como el pasivo.
Queroseno: Importante factor desencadenante en nuestro medio. Estudios cubanos han
demostrado broncoconstricción tras su exposición. Todos los asmáticos deben evitar su
inhalación.
Sprays y compuestos volátiles: Usarlos lo menos posible y siempre con buena ventilación.
Contaminación exterior: Está demostrado su papel como desencadenante de crisis. En
casos de fuerte contaminación atmosférica se recomienda evitar el ejercicio físico
innecesario, cerrar ventanas, utilizar aire acondicionado y aumentar el tratamiento
preventivo.
Asma ocupacional: Se recomienda, una vez identificado el agente causal, separar al paciente
de este.
En algunos casos se han efectuado cambios en los procesos industriales para abolir el uso
de sustancias muy sensibilizantes.
Alimentos: Es importante recordar el efecto desencadenante de los sulfitos aditivos que se
usan en vinos blancos, cidras, cerveza, frutas secas, otros. El papel de otros aditivos y
conservantes parece poco importante. (18)
Conclusiones
El asma bronquial es una enfermedad que puede aparecer a cualquier edad y presenta un
alto índice de incidencia y prevalencia a nivel mundial. Nuestro país no escapa a esta
situación, dada la presencia de un clima húmedo y tropical que favorece el desarrollo de
enfermedades respiratorias. Amplias son las medidas que el asmático y sus familiares
pueden aplicar encaminadas a disminuir las crisis y la mortalidad. El paciente debe adquirir
suficientes conocimientos sobre su enfermedad, para de esta forma, junto al tratamiento
orientado por el especialista y el seguimiento realizado por el médico y la enfermera de la
familia, restituirlo al mejor nivel de actividad posible, mantener una función pulmonar
óptima, y en general, mejorar su calidad de vida
Bibliografía
Temas de FC
S. García de la Rubia, S. Pérez Sánchez
Pediatra de Atención Primaria. Centro de Salud Infante. Murcia
Resumen
El asma es una de las enfermedades
crónicas más frecuentes en la infancia.
Se ha comprobado un aumento de su
prevalencia en escolares de 6-7 años
de edad.
Un buen manejo del asma pasa por una adecuada formación del personal
sanitario (pediatras y enfermería pediátrica), una organización interdisciplinaria
y la concienciación de la enfermedad como problema de salud. Pese al esfuerzo
de las distintas sociedades científicas, creemos que esto está todavía pendiente
de conseguirse en su totalidad.
Fenotipos
A pesar de los importantes estudios puestos en marcha en el campo de la
epidemiología, biología y genética del asma, que desde hace tiempo se vienen
desarrollando, sus causas siguen siendo desconocidas.
Cada grupo presenta una serie de características (Tabla I) que nos permiten
prever su historia natural.
• Criterios mayores:
a. Diagnóstico médico de asma en alguno de los padres.
• Criterios menores:
Por lo tanto, niños con sibilantes recurrentes por debajo de los tres años, que
cumplen con un criterio mayor o dos menores tendrán una elevada probabilidad
de padecer en el futuro un asma persistente atópico (IPA+).
Patogenia
El asma es un proceso inflamatorio de las vías respiratorias en el cual
intervienen varios tipos de células inflamatorias y múltiples mediadores.
La inflamación en el asma es persistente, a pesar de que los síntomas son
episódicos, y la relación entre la severidad del asma y la intensidad de la
inflamación no está claramente establecida.
Los efectos de la inflamación de las vías respiratorias se extienden en la mayoría
de enfermos al tracto respiratorio superior y la nariz, pero los efectos
fisiopatológicos son más pronunciados en bronquios de mediano calibre. El
patrón inflamatorio de las vías respiratorias parece ser similar en cualquier forma
clínica de asma, sea alérgica o no alérgica o inducida por aspirina, y en todas las
edades(7-11).
Células inflamatorias
Las características inflamatorias que encontramos en enfermedades alérgicas
son las que se aprecian en el asma. Existe una activación de los mastocitos,
aumento del número de eosinófilos activados e incremento del número de
receptores de linfocitos T cooperadores con perfil de citocinas de predominio T-
helper2 (Th2) y células T-killer, los cuales producen la liberación de mediadores
que contribuyen a los síntomas. Las células de la pared de la vía aérea también
intervienen en el proceso inflamatorio y de reparación, producen mediadores
inflamatorios y contribuyen a la persistencia de la inflamación.
Fisiopatología
El hecho fisiológico principal de la exacerbación asmática es el
estrechamiento de la vía aérea y la subsiguiente obstrucción al flujo aéreo
que, de forma característica, es reversible(7-11).
Varios factores son los que contribuyen al estrechamiento de la vía aérea en el
asma.
• El engrosamiento de las paredes de los bronquios, que ocurre por los cambios
estructurales que denominamos “remodelamiento”, puede ser importante cuando
la enfermedad es más grave y no regresa totalmente mediante el tratamiento
habitual.
Hiperrespuesta bronquial
Una circunstancia característica de la enfermedad, aunque no exclusiva, es el
fenómeno de la hiperrespuesta bronquial (HRB).
• Los nervios sensoriales, que pueden estar más reactivos por la inflamación, lo
que puede llevar a una broncoconstricción exagerada en respuesta a los
estímulos sensoriales.
Factores que influyen en el desarrollo y expresión
del asma
Los factores que influyen en el riesgo de padecer asma(8-12) pueden ser
divididos en factores causantes del desarrollo de asma y los
desencadenantes de los síntomas de asma. Los primeros incluyen los
factores dependientes del huésped (que son, principalmente, genéticos) y
más tarde son, habitualmente, factores ambientales (Tabla III).
No obstante, los mecanismos que influyen en el desarrollo y expresión del asma
son complejos e interactivos. Por ejemplo, probablemente unos genes
interactúan con otros genes y con factores ambientales para determinar la
susceptibilidad del asma.
Los genes que predisponen al asma son genes que también se han asociado
con la respuesta al tratamiento del asma; por ejemplo, variaciones en el gen
codificador del receptor beta adrenérgico han sido vinculados a diferencias en la
respuesta de los beta agonistas. Otros genes de interés modifican la respuesta
a los glucocorticoides y leucotrienos. Por tanto, estos marcadores genéticos
tienen interés, probablemente, no sólo como factores de riesgo en la patogénesis
del asma, sino también como determinantes de la respuesta al tratamiento.
Obesidad
Se ha demostrado la obesidad como un factor de riesgo de asma. Ciertos
mediadores, tales como la leptina, pueden afectar a la función de la vía aérea e
incrementar la probabilidad del desarrollo del asma.
Sexo
El sexo masculino es un factor de riesgo para desarrollar asma en el niño. Antes
de los 14 años, la prevalencia de asma es, aproximadamente, dos veces mayor
en niños que en niñas. Durante la adolescencia, esta diferencia se iguala y, en
el periodo adulto, el asma es más frecuente en la mujer. La razón de esta
diferencia es desconocida. No obstante, el calibre del bronquio es más pequeño
en varones que en niñas al nacer, pero mayor en la edad adulta.
Alérgenos
A pesar de que los alérgenos, tanto de interior como de exterior, son conocidos
como causa de exacerbación asmática, su papel específico en el desarrollo del
asma no está enteramente resuelto. Estudios sobre grupos de edad similares
muestran que, la sensibilización a los alérgenos de los ácaros del polvo, epitelio
del gato, epitelio del perro y aspergilo son factores independientes de riesgo para
los síntomas del asma en el niño de más de 3 años de edad. No obstante, la
relación entre exposición a alérgenos y sensibilización en niños no es sencilla,
depende de los alérgenos, de las dosis, del tiempo de exposición, de la edad de
los niños y, probablemente, incluso de la genética.
Para algunos alérgenos, tales como los derivados del polvo de la casa y de las
cucarachas, la prevalencia de sensibilización parece estar correlacionada
directamente con la exposición. No obstante, la exposición a los alérgenos de
ácaros del polvo puede ser un factor causante del desarrollo del asma. La
infestación por cucarachas parece ser un factor importante de causa de
sensibilización alérgica en núcleos urbanos.
Infecciones
Durante la infancia, un grupo de virus se han asociado con el inicio del fenotipo
asmático. Los VRS y virus parainfluenza ocasionan una variedad de síntomas,
incluida la bronquiolitis, que simulan muchas características de los niños con
asma. Estudios prospectivos a largo plazo en niños hospitalizados con
diagnóstico de VRS han mostrado que, aproximadamente, el 40% continuarán
con sibilantes o tendrán asma en el futuro. Por otro lado, la evidencia también
indica que, ciertas infecciones respiratorias tempranas en la vida, incluidos el
sarampión y en algún momento el VRS, pueden proteger del desarrollo de asma.
Respecto a las infecciones parasitarias, aunque en general no protegen contra
el asma, la infección por anquilostoma puede reducir el riesgo.
Exposición al tabaco
Tanto a nivel prenatal, como postnatal, la exposición al tabaco se asocia con
efectos perjudiciales, incluido un mayor riesgo de desarrollar síntomas
semejantes al asma en niños pequeños. No obstante, la evidencia sobre el
aumento del riesgo de enfermedades alérgicas es incierta.
Estudios de función pulmonar realizados tras nacer el niño muestran que, cuando
la madre fumó durante el embarazo, existe influencia sobre el desarrollo
pulmonar. Además, niños de madres fumadoras tienen cuatro veces más
posibilidades de desarrollar sibilantes en el primer año de vida. En contraste,
existe poca evidencia de que el tabaco, durante el embarazo, tenga efecto sobre
la sensibilización alérgica. La exposición pasiva al humo del tabaco aumenta el
riesgo de infecciones de vías bajas en el lactante y en el niño.
Polución
La polución ambiental como causa de asma sigue siendo controvertida. Niños
que viven en un ambiente de alta polución tienen disminuida su función
pulmonar. Pero la relación entre su baja función pulmonar y el desarrollo de asma
es desconocida.
Dieta
Los niños alimentados con fórmula artificial, leche de vaca o proteína de soja
tienen una mayor incidencia de sibilantes en el periodo de lactancia comparado
con los alimentados al pecho.
Algún dato sugiere que ciertas características de la dieta occidental, tales como:
el aumento de consumo de alimentos procesados, la disminución del consumo
de antioxidantes (en forma de frutas y verduras), el incremento de ácidos grasos
omega-6 poliinsaturados (que se encuentran en la margarina y el aceite vegetal)
y la disminución de ácidos grasos omega-3 poliinsaturados (presentes en el
pescado) de la ingesta ha contribuido al reciente aumento de asma y
enfermedades atópicas.
Clima
Se ha observado que el clima puede actuar como un desencadenante de los
episodios de asma. En condiciones de mucha humedad o mientras se produce
una tormenta, los granos de polen pueden sufrir una ruptura osmótica y liberar
parte de su contenido, en forma de partículas respirables 0,5-2,5 µm(9). Por
tanto, las personas afectadas de alergia al polen deberían tener cuidado si se
encuentran en la intemperie durante una tormenta en la estación polínica.
Por el contrario, existe una baja probabilidad de asma en aquellos niños que
presentan: síntomas exclusivamente con los catarros, catarros aislados en
ausencia de sibilantes o dificultad respiratoria, signos auscultatorios
repetidamente normales, FEM o espirometría normal cuando están con síntomas
y ausencia de respuesta al ensayo del tratamiento de asma.
Diagnóstico funcional
Espirometría
El diagnóstico de asma es sencillo cuando se detectan sibilancias en el
niño y responden al tratamiento broncodilatador, pero, a menudo, el
diagnóstico es incierto cuando recurrimos exclusivamente a los síntomas.
En niños de edad escolar, una prueba de broncodilatación, el estudio de la
variabilidad en el FEM o una prueba de provocación bronquial se pueden
utilizar para confirmar el diagnóstico.
La espirometría es una herramienta simple y fácilmente disponible para la
valoración de la función pulmonar. Es útil para el diagnóstico y seguimiento del
asma en niños de más de 6 años. Las pruebas de función pulmonar en el niño
de menos de 6 años necesitan, por lo menos, de la cooperación pasiva del
paciente, aunque no exista coordinación. No obstante, a pesar de que estas
pruebas tienen un valor en investigación clínica y epidemiológica, su valor para
contribuir a la gestión clínica del niño en estas edades resulta, cuando menos,
incierta.
Figura 1. Curvas
según los distintos patrones espirométricos.
Prueba de provocación
La prueba de provocación con el ejercicio sería de elección(18), por ser
sencilla de realizar y presentar una alta especificidad.
Cuando, tras la realización de una espirometría con prueba broncodilatadora, el
diagnóstico de asma no se puede confirmar, se pueden utilizar pruebas de
provocación bronquial para demostrar la existencia de hiperrespuesta bronquial.
Una caída igual o mayor del 15% en el FEV1 se considera como una respuesta
positiva.
Diagnóstico alergológico
Otra ayuda para el diagnóstico será la valoración del estado atópico.
Por lo tanto, la valoración del control del asma debería incluir, no solamente el
control de las manifestaciones clínicas (síntomas diurnos y/o nocturnos,
despertares nocturnos, mantenimiento de la función pulmonar, uso de
medicación de rescate, limitación de la actividad) (Tabla XI), sino también el
control del riesgo previsto en el futuro de los pacientes, tales como:
exacerbaciones, disminución acelerada de la función pulmonar y posibles
efectos secundarios del tratamiento.
Indudablemente, cada pediatra podrá actuar con arreglo a los medios que posea,
pues conocidas son las distintas posibilidades entre consultas incluso dentro de
la misma Comunidad Autónoma.