La Escuela Radiofénica como un centro cultural ~ por Juan Pablo Angarita Bernal ~ Para Elvia Paleo Uleue,bibitecaria en Corinto, Cauca, y estudiante de las Escuelas Radifénicas de Radio Sulatenza. Escuela: del lat. schol, y este del gr. oxo schol omnipresente en el discurso pero ausente o carente en el terri= jtorio. Dicha como un escenario de observacién, aprendizaje, formacién, capacitacién, enfrentamiento, reflexi6n y discusi6n; repre- sentativa de valores que ondulan entre lo democratico, abierto y nove- oso y lo opresor, tradicional o solemne, Ta escuela como un espacio ajeno al tiempo del trabajo en donde irculan interpretaciones de 1a experiencia del mundo, La escuela como Ja atmésfera necesaria para la circulacién de los conocimientos, las creencias y las doctrinas. La escuela como la idea que compartian libe- tales y conservadores: como camino hacia lo habitual, 0 como herra- mienta para aprender a observar, escuchar y decir el pais; como espa- cio en donde resuenan voces, o como escenario del cambio, La escuela Piiblica en todo el pais como un deseo acallado, ‘ E nla historia de Colombia, la escuela se sittia como un espacio te frase: “La educacion nos hace libres, el ighorante es un esclavo”, En la historia de Golombia la Escuela Radiofonica hizo reso- nar esa frase, Gon toda la rigidez que puede traer la formula, la puso a 101TT. - eee hilos aba conocer o ignorat relativo a la radiofoni ~phonta, “‘gnido”. La Escuela Radiofénica como una idea inaudita en la historia Ja que se participa? (La escucla de la comunicat accion? gLa escucla que les llega a todos? i Decia Idaria Soffa Valencia en una carta dirigida a Radio Sutatenza enjulio de 1966, que desde donde escribia—en el Tambo, Cauca~habia. varios radios, pero nadie tenia Escuela Radiofonica como la de ella. Se irigia al profesorlocutor Enrique Lozano, presentandose como auxi- liar inmediata en el proceso de aprendizaje de su hermano y su padre; éte Gitimo, decia Idaria, esté “contento y agradecido porque ya sabe firmar su nombre”. ‘Como Tdaria, mas de tres millones de campesinos colombianos tuvieron contacto con las Escuelas Radiofonicas (BERR) de Accion Cultural Popular (ACPO), sistema educative que entre 1947 y 1993 se expandi6 pormas de 955 municipios del pais. Las EERR, consideradas ¢l ee del sistema, eran definidas como el modelo de edueacién a distan- cia que le brindatia herramientas a los campesinos colombianos para “formarse integralmente”. En palabras del fundador del sistema, José Joaquin EERR eran “el medio y el remedio”: la pee oe a te campesinos colombianos, esa franja de més del 50% de la poblacign del 102 . Como Idaria Sofia, jamente a las oficinas nia, de sus progresos casas, ahora convertidas ible que une por un instante un tre puntos en movimiento modo que en cada segundo la ciudad infeliz una ciudad feliz que ni siquiera sabe que existe". Las cadade isis (1972), Italo Calvino La década de 1940 miraba hacia el pasado para definir el “futuro de la nacién”, La escuela, como un deseo, recibia a los maestros recién formados en las Escuelas normales. Las aldeas, como aislados y silen- ciosos remansos acudticos, vean su vida pausada interrumpirse por la voz del parroco, comentando la politica de turn: i rales debjan preguntarse por el problema de la tierra; conservadores debian volver a temerle a los jios que trajeron los liberales en 1863. La prensa animaba la discusion politica: que si el liberalismo era un basilisco mas6n y comunista a favor del progres individualista que acabaria con la famili el conservadurismo era el poder encubierto y doctrinario de presidentes poctas cl medio era la palabra XIX contaba la nacién; ahora la escucla seria el ambiente en el que 103yy se cantaban I Biblioteca Aldeana de Cultura, enviada desde into con Ja encuesta nacional folclérica, qu ‘asus vecinos, La experiencia se encontraria con la historia escrita: sien Jos libros se preguntaba si la cultura popular era el alma de la naci6 perdida desde finales del siglo XIX, en la encuesta nacional folel6rica se incitaba a los maestros a preguntar sien las aldeas contaban con una tradicién oral que diera cuenta de la memoria y los habitos culturales compartidos por todos. En la nacién de los presidentes poctas se ense~ Fiaban sonetos de memoria y se acumulaban bibliotecas con un recelo solemne. Ta Radiodifusora Nacional ~que no era nacional programaba conferencias sobre Ja importancia de la literatura nacional —que ‘tampoco llegaba a ser nacional-. En las cadenas radiales comenzaban. a aparecer concursos de bambucos y pasillos, considerados la miisica " popular nacional, y en los parlantes piblicos también se transmitian noticieros. El aparato radio era un'lyjo, pero cl sonido irrumpia en el silencio de las aldeas aisladas. Cada escuela recibié una coleccin de la Biblioteca Aldeana, como un acervo de la cultura popular del pais que ahora volvia al pueblo de ese pais. ’ Con el deseo de la escucla y la radio también llegé por 50s afios, de nuevo, el sonido estridente de la Violencia. El 9 de abril de 1948, oa liberales se tomaban la Radiodifusora Nacional para hablarle iAtencién, pueblo liberal de Colombia! jAlé, al6, fuerzas revo- 108 a a Iv “El pueblo, como un remanso, 6 mas bien como un lento remolino del ri, ‘daba vueltas sobre sf mismo” FL Crist de epaldes (1952), Eduardo Caballero Calderén Desde finales de la década de 1940, las Escuelas Radiofonicas de ACPO se constituyeron como centros rurales para cl autoaprendizaje a través de la escucha radial y de la lectura de cartllas, periédicos, libros y afiches ~medios complementarios del sistema Desde entonces y hasta finales de la década de 1980, su funcionamiento fae continuo ¥ se expandié por 955 municipios del territorio nacional, sobre todo ‘gracias a que se organiz6 un sistema estable de formacion de replicado- res campesinos, que, de la mano con AGRO, trabajaron en red por todo) dl pais y llegaron a muchos lugares donde no habia llegado el Estado por entonces (ni atin en esta segunda década del siglo XX). Durante la década de 1960, esa red que en un principio se habia apoyado cn la institucionalidad cat6lica pas6 a recibir financiacién y soporte politico de los gobiernos del Frente Nacional (especialmente de_ los gobiernos liberales), de algunos gremios empresariales y de onga- nizaciones internacionales interesadas en cl desarrollo rural. Gracias