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CAPÍTULO I: MANEJO PREHOSPITALARIO DE LA VÍA AÉREA

CAPÍTULO I

Manejo prehospitalario de la vía aérea

Enrique Arango, MD
Jefe, del Departamento de Anestesiología
Fundación Santa Fe de Bogotá

Juan Carlos Díaz, MD


Residente Anestesiología
Universidad El Bosque

LA ATENCIÓN PREHOSPITALARIA

L a atención prehospitalaria está en cons-


tante evolución y ha pasado de ser un oficio
a convertirse en una verdadera especialidad.
hospitalaria, se ha recurrido a múltiples in-
tervenciones que pertenecen a diferentes es-
pecialidades, originando distintas opiniones
En la atención prehospitalaria de las víctimas entre la población médica y no médica con
de una situación de emergencia concurren mu- respecto a su uso. Recientemente, el control
chos aspectos que deben ser tenidos en cuen- prehospitalario de la vía aérea ha sido cues-
ta; son prioritarios y de realización inmediata: tionado, en particular cuando se lleva a cabo
una inducción de secuencia rápida. Aún los
1. Permeabilidad de la vía aérea. diferentes sistemas de emergencia en mu-
2. Estabilización de la columna. chos países se debaten entre el “cargar e
3. Ventilación adecuada. irse” versus “permanecer y actuar” (Load and
4. Mantenimiento de la circulación. go versus stay and play). Sin embargo el
5. Prevención de lesión cerebral secundaria. beneficio de una práctica no solo adecuada
6. Evitar la hipotermia. sino salvadora está demostrado, y no hay
lugar a discusión a este respecto: en los últi-
Se debe trasladar el paciente con la menor mos 30 años se ha observado una reducción
demora posible y en las mejores condiciones en la morbilidad y mortalidad gracias al ma-
a un sitio donde se pueda dar atención defini- nejo temprano de situaciones de emergen-
tiva. Esta guía se ocupa del cuidado de la vía cia. El cuidado adecuado de la vía aérea es
aérea en el escenario prehospitalario. siempre una habilidad que se debe adquirir,
por cuanto es uno de los pilares de la reani-
mación cardiopulmonar. Los esfuerzos aho-
LA DISCUSIÓN: ra se encaminan a encontrar y perfeccionar
NO HACER MÁS DAÑO protocolos para el manejo de los pacientes
en forma adecuada, sin hacer más daño,
En la medida que se han desarrollado y mientras llegan a un servicio de urgencias
organizado los sistemas de atención pre- para ser atendidos.

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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PATRONES DE MORTALIDAD alternativos (tal vez de primera línea en algu-


nos casos) para el cuidado de la vía aérea. A
La distribución trimodal de las muertes, espe- continuación se presenta un breve resumen
cíficamente luego de un trauma, fue descrita de las diferentes técnicas y dispositivos útiles
por primera vez en 1983, cuando se notó que en el cuidado prehospitalario de la vía aérea.
el 50% de los decesos ocurría en la primera
hora. Se caracterizan en inmediatas (minutos),
tempranas (horas), y tardías (días y semanas). ELEVAR LA MANDÍBULA
Muchas de estas se deben a problemas po-
tencialmente tratables de la vía aérea, ventila- Esta es la maniobra más simple para ejecutar
torios, y circulatorios, lo cual representa una de forma inmediata. El solo hecho de reali-
hora dorada de oportunidad para influir sobre zarla puede ser suficiente para abrir y mante-
la morbimortalidad, a favor o en contra. ner permeable la vía aérea. Se puede hacer
con poco esfuerzo, con una mano en el men-
tón para llevarlo hacia arriba y hacia atrás.
CUÁNDO ACTUAR? Puede ser necesario utilizar las dos manos
colocándolas en los ángulos de la mandíbula
Es claro que pacientes con trauma penetran- para empujarla hacia adelante (sin hiperexten-
te cardiaco o de grandes vasos deben ser sión cervical). Se dificulta el éxito de la ma-
transportados de inmediato, sin ningún retra- niobra si existen deformidades faciales, trau-
so; en cambio, pacientes con trauma craneo- ma cervical, o el paciente colabora poco o se
encefálico, se benefician más con una estabi- opone, tal vez por excitación semi-conciente.
lización en la escena e intubación electiva para
optimizar la oxigenación. Sin embargo, pue-
de estar tan comprometido el estado de con- LIMPIAR, SUCCIONAR, DESOBSTRUIR
ciencia que no necesita medicación alguna, o
se hace necesaria la utilización de drogas para Fundamental en el mantenimiento de la per-
facilitar la intubación, disminuir la respuesta a meabilidad de la vía aérea, se vaya a intubar o
esta y mantener sedación. Es aquí donde el no. Limpieza manual simple, o con el uso de
experto a cargo debe decidir en cada caso pinzas adecuada (Magill). ¿Hay un sistema de
particular y actuar de manera razonable de succión disponible en la ambulancia? Se debe
acuerdo con las normas y sus conocimientos. considerar la colocación de una cánula orofa-
ríngea (de Guedel), para evitar la obstrucción
producida por la relajación de los tejidos blan-
CUAL VÍA AÉREA? dos, según el grado de conciencia (no debe
colocarse en pacientes concientes). Existe el
La intubación endotraqueal es reconocida riesgo de desencadenar el reflejo de vomito;
como la técnica posible, el patrón de oro” (gold las cánulas vienen en diferentes tamaños. Si
standard) para asegurar la vía aérea, pero la condición imposibilita la apertura oral, se dis-
como todos los “patrones de oro”, puede no pone de una cánula nasofaríngea que obvia
ser la más fácil ni la más inocua. Se requiere esta dificultad, aunque puede producir epistaxis
suficiente destreza y práctica regular. La más- y está contraindicada su colocación si se sos-
cara laríngea y el combitubo son dispositivos pecha fractura de la base craneana.

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CAPÍTULO I: MANEJO PREHOSPITALARIO DE LA VÍA AÉREA

OXÍGENO SUPLEMENTARIO lación manual de transporte. Viene en dife-


rentes tamaños.
Es una medida que debe tomarse tan pronto
como se establezca la permeabilidad de la vía
aérea. No debe diferirse mientras se está tra- E.O.A.
tando de intubar o realizar otras maniobras he-
roicas. Lo importante es que ingrese el oxíge- Esophageal Obturator Airway. Dispositivo uti-
no, no el tubo. En paciente con respiración es- lizado por paramédicos. Se coloca a ciegas
pontánea puede ser suficiente la administra- en el esófago, lo cual lo hace de fácil uso. Con
ción de oxígeno por cánula nasal a 1, 2 ó 3 un balón distal que se infla dentro del esófa-
litros por minuto, lo que asegura una FiO 2 de go, no tiene orificio distal, y proximal al balón
24%, 28% y 32%, respectivamente; si se re- se encuentra el orificio de ventilación. Se le
quiere un mayor aporte de oxígeno entonces han atribuido complicaciones por mal manejo
se puede recurrir a sistemas de administración como perforación esofágica y broncoaspira-
con máscara facial o Venturi al 40% o 50%. ción. Viene en tamaño único para adulto.

MÁSCARA FACIAL COMBITUBO

Puede ser suficiente la ventilación y oxigena- El combitubo esófago-traqueal, se diseñó para


ción con este elemento de fácil consecución. el cuidado de la vía aérea difícil en situaciones
Requiere apenas elemental destreza para su de emergencia. Es un tubo de doble luz, que
manejo y para sujetarla al rombo facial. Se permite la ventilación lo mismo si se coloca en
pueden presentar dificultades para acomodar- el esófago que en la traquea. Presenta dos ba-
la en pacientes obesos, con barba o con des- lones: uno distal, pequeño que puede quedar
trucción del macizo facial en sus tercios me- ubicado traqueal o esofágico, y otro proximal
dio o inferior, caso en el cual el paciente pue- de mayor volumen que se ubica en la orofa-
de ser llevado a un servicio de urgencias en ringe. Si el tubo queda alojado en el esófago, a
donde probablemente requiera ser intubado, través de esta luz distal se puede succionar
sin que previamente el paciente haya sido contendido gástrico, mientras por la otra luz se
demorado o complicado en intentos fallidos ventila hacia la laringe por medio de pequeños
de intubación prehospitalaria. La máscara fa- orificios ubicados en el segmento de tubo que
cial no protege contra la broncoaspiración, queda entre los dos balones. Si en cambio se
puede causar insuflación gástrica, y requiere logra colocar en la traquea, se ventila directa-
colaboración del paciente colaborador. mente por el orificio distal, pero no se puede
succionar. Puede ser colocado a ciegas, o por
laringoscopia. Viene en dos tamaños para adul-
C.O.P.A. to. También se ha visto asociado con complica-
ciones como ruptura esofágica, traqueal y lesio-
Cuffed Oropharyngeal Airway. Es un disposi- nes faríngeas; sin embargo, su uso apropiado
tivo similar a una cánula de Guedel, pero pre- aún en manos no expertas, puede permitir una
senta en su extremo distal un balón que al adecuada ventilación en situación de emergen-
inflarse separa la orofaringe de la cavidad oral, cia. Se ha utilizado con éxito en reanimación
y en su extremo proximal un conector univer- cardiopulmonar como método para asegurar
sal para el AMBU u otro dispositivo de venti- la vía aérea durante paro cardiaco.

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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MÁSCARA LARÍNGEA EVALUACIÓN DE LA VÍA AÉREA

Es uno de los elementos más fáciles y rápidos ¿Es adecuado hacer una adecuada medición
de colocar. Da una situación intermedia entre de los factores de predicción de vía aérea di-
tener un paciente intubado y tenerlo con más- fícil en una situación de emergencia? Tal vez
cara facial. Requiere un breve aprendizaje pa- no, pero en el escenario del trauma o de cual-
ra su correcta colocación. Se pone a ciegas y quier otra urgencia, se debe hacer una rápida
es útil en vía aérea difícil. Consiste en un tubo pero adecuada evaluación de los factores que
cuyo extremo distal se abre a un elemento de comprometen la integridad de la vía aérea, y
silicona ovalado e inflable que se acomoda de la dificultad con la que se tropezaría si se
en la laringo-faringe. No permite una vía aérea llegara a necesitar intubación.
definitiva, pero asegura ventilación y oxige-
nación de emergencia. Disponible en todos La clasificación de Mallampati relaciona el ta-
los tamaños, desde lactantes hasta adultos. maño de la lengua con respecto a la cavidad
Los tamaños se numeran 1, 1 1/2, 2, 21/2, 3, 4 y orofaríngea: se ordena al paciente que abra
5. No protege de la broncoaspiración. Existen la boca y saque la lengua; se establece un
además: la máscara Fast-Track o máscara Mallampati clase I cuando se observa el pala-
laríngea de intubación, que posibilita avanzar dar blando, fauces, úvula, y pilares amigdali-
un tubo orotraqueal a través de ésta; y la más- nos anteriores y posteriores; clase II si solo
cara laríngea Pro-Seal, provista de dos luces, se observa el paladar blando, fauces y úvula;
uno de las cuales se abre distalmente a la clase III si se ven paladar blando y base de la
punta de la máscara y comunica con en esófa- úvula; y clase IV si solo se observa el paladar
go, permitiendo la succión gástrica. Es atrac- duro. La distancia tiro-mentoniana se mide
tiva la utilización en el campo prehospitalario desde el borde inferior del mentón hasta la
debido a la reducción en la necesidad de intu- escotadura superior de la prominencia del car-
bación, la menor destreza requerida, y la po- tílago tiroides. Los Mallampati III o IV, y la dis-
sibilidad de colocarla sin realizar movimien- tancia tiromentoniana menor de 6,5 cm. (me-
tos de la cabeza o cuello. nos de tres traveses de dedo) están relaciona-
dos con laringoscopia difícil. Una laringoscopia
difícil significa que no se puede observar por-
OBTENCIÓN DE UNA VÍA AÉREA ción alguna de las cuerdas vocales para introd-
DEFINITIVA ucir el tubo bajo visión directa. Otro parámetro,
la movilidad de la columna cervical, es mejor
El paciente puede requerir intubación endo- no averiguarlo, ya que en situaciones de trau-
traqueal, ya sea para protección de la vía aé- ma por el contrario hay que inmovilizarla, de-
rea, por compromiso de la vía aérea, o por pendiendo del mecanismo del trauma.
inadecuada ventilación y oxigenación. Hay
tres métodos:
INCIDENCIA DE VÍA AÉREA DIFÍCIL
1. Intubación orotraqueal.
2. Intubación nasotraqueal. La incidencia varía según la definición utiliza-
3. La vía aérea quirúrgica. da en los estudios, y se encuentra entre el
0,05 y 18%. En las salas de cirugía la intuba-
ción difícil ocurre entre el 1,1 y 3,8%, y la intu-
bación fallida entre el 0,13 y 0,3%. Pero la fre-

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CAPÍTULO I: MANEJO PREHOSPITALARIO DE LA VÍA AÉREA

cuencia es mucho más alta en el entorno ALGORITMO DE LA VÍA AÉREA


prehospitalario y la sala de urgencias: La intu-
bación difícil está reportada en un 10,8%. Se El éxito en asegurar la vía aérea se puede ver
ha encontrado intubación fallida en 4% de pa- afectado por diversas situaciones propias del
cientes en transporte aeromédico, y 3% en la trauma, o por condiciones anatómicas del pa-
sala de emergencias. Las razones son: el per- ciente. La siguiente es una adaptación del al-
sonal entrenado, el tipo de paciente, y las con- goritmo de cuidado de la vía aérea utilizado
diciones locales. por la American Society of Anesthesiologists:

VÍA AÉREA DIFÍCIL + Siempre considere perdir ayuda (técnica,


médica, quirúrgica, etc.) cuando hay dificul-
ANTICIPADA tad para ventilación con máscara o la
intubación

Paciente no
NO ANTICIPADA
++ Considerar la necesidad de preservar la
colaborador ventilación espontánea

PREPARACIÓN
Vent. con A. General +/-
máscara sin Parálisis ++
problema
Intubación Máscara laríngea
Despierto*+ NO Combitubo
Ventilación Ventilación del
con Máscara+ (emergencia) transtraqueal

Éxito Fallo
SI (no Vía Aérea
Vía Aérea emergencia) Quirúrgica
Quirúrgica Opciones*

Opciones*+

Éxito
Fallo
Confirmar
Vía Aérea
Quirúrgica
Ventilación Con Máscara

* Alternativas consisten en otros tipos de laringoscopios, técnicas a ciegas, con fibra óptica, estilete, retógrada, estilete
luminoso, broncoscopio rígido, traqueostomía percutánea.

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INTUBACIÓN ENDOTRAQUEAL más de estar contraindicada en fracturas de


tercio medio facial y de base de cráneo. Se
La definición de intubación fue hecha en 1943 debe elegir el orificio nasal más grande, prepa-
por Sir Robert Macintosh como la inserción rarlo adecuadamente con abundante lubrica-
de un tubo en el interior de la traquea con el ción y el uso de vasoconstrictores. El tubo en-
fin de ventilar, oxigenar, aspirar y proteger el dotraqueal debe ser previamente calentado y
árbol bronquial. Las indicaciones de intubación lubricado para su paso atraumático teniendo
en caso de emergencia se pueden dividir en en cuenta que el bisel del mismo debe ir pa-
cuanto al grado de urgencia de la vía aérea ralelo al tabique nasal.
en cuatro categorías:
La intubación nasal a ciegas está contraindi-
1. Inmediata: intervención en apnea. cada en el paciente apnéico. En pacientes con
2. Emergencia: intervención en falla respira- trauma penetrante a cuello, podría resultar en
toria. la pérdida de la vía aérea debido a expansión
3. Urgencia: intervención en pacientes esta- de hematomas.
bles en quienes por su condición se prevé
un próximo compromiso de la vía aérea.
4. Tardía: intervención en aquellos pacientes INTUBACIÓN OROTRAQUEAL
que presentan problemas pulmonares de
alto riesgo como síndrome de dificultad res- La intubación orotraqueal con estabilización
piratoria del adulto. axial en línea es más segura que la nasotra-
queal como método de asegurar la vía aérea
En el entorno prehospitalario se debe identifi- y ha sido incorporada dentro del protocolo para
car pronto las personas que requieran intuba- intubación de emergencia en el ATLS (Advan-
ción inmediata y de emergencia. Se debe con- ced Trauma Life Support).
tar con un laringoscopio en correcto estado
de funcionamiento, luz probada, hojas curvas
y rectas, fuente de oxígeno; se debe preoxi- INDUCCIÓN DE SECUENCIA RÁPIDA
genar, disponer de un equipo de succión, más-
cara facial, guías y tubos endotraqueales revi- Se ha realizado intubación con leve sedación
sados. Elementos más especializados en ma- o sin usar medicación alguna, con el objetivo
nos expertas son de gran ayuda, como el esti- de no comprometer el estado de conciencia,
lete luminoso (lightwand), el estilete (bougie) y de no empeorar el cuadro. Pero esto mu-
de goma, y el fibrobroncoscopio, entre otros. chas veces dificulta todo intento de intubación
y puede ocasionar más trauma y por eso se
ha venido reconociendo la necesidad de ha-
INTUBACIÓN NASOTRAQUEAL cer una inducción. Todo paciente en situación
de emergencia debe considerarse con estó-
La vía nasal ofrece menor incomodidad para mago lleno, y por lo tanto la técnica de elec-
el paciente con menor desplazamiento del tu- ción es la inducción de secuencia rápida (ISR).
bo endotraqueal y menor incidencia de lesión Consiste en la preoxigenación, seguido de la
endotraqueal que la intubación por vía oral, aplicación de un agente hipnótico de rápido
pero tiene los inconvenientes de requerir ma- inicio y corta duración (3 a 5 mg/Kg de Tio-
yor entrenamiento, mayor tiempo para su reali- pental por ejemplo), y un agente bloqueador
zación y la utilización de tubos pequeños, ade- neuromuscular de similares características

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CAPÍTULO I: MANEJO PREHOSPITALARIO DE LA VÍA AÉREA

(Succinilcolina 1 a 1,5 mg/Kg); un asistente mente en la región supraglótica y glótica esti-


mantiene presión cricoidea (Maniobra de mula los reflejos protectores de la vía aérea
Sellick), para prevenir la broncoaspiración por que llevan a respuestas de tipo endocrino,
regurgitación al perder la conciencia. Si se metabólico, cardiovascular y respiratorio. Pro-
sospecha lesión cervical, otro asistente man- duce liberación de catecolaminas (dopamina,
tiene la estabilización de la columna cervical adrenalina, noradrenalina), beta-endorfinas y
en línea. cortisol, lo cual se traduce clínicamente en
hipertensión, taquicardia, diaforesis e hipergli-
La intubación nasal a ciegas ha mostrado un cemia. La respuesta ventilatoria va desde ta-
éxito del 65% y se toma en promedio 276 se- quipnea hasta laringoespasmo y broncoes-
gundos, en contraste con la oral que alcanza pasmo con la posterior desaturación e hipoxe-
un éxito de casi el 100% y se toma en prome- mia. Todas estas respuestas dependen de la
dio 64 segundos. condición del paciente.

LA LARINGOSCOPIA POSICIÓN DEL PACIENTE

La laringoscopia permite la observación de la El paciente debe estar en posición supina, con


apertura glótica. Se requiere una apertura oral el cuello inmovilizado y en posición neutra (si
de por lo menos 3 cm, la protección de dien- se sospecha o presenta lesión cervical), o en
tes y labios y la adecuada posición de cabeza posición de olfateo (extensión de la cabeza
y cuello del paciente. Se debe tomar el larin- con flexión de la columna cervical) si lo per-
goscopio con la mano izquierda y elegir la hoja mite. Idealmente se debe colocar una almo-
adecuada. La hoja curva debe ser deslizada hadilla o elemento similar que permita la ele-
por la lengua hasta la base de la misma y des- vación del occipucio unos 8 a 10 cm de la
plazando la lengua a la izquierda, en este mo- base. Esta posición alinea los tres ejes de la
mento se lleva hacia adelante y hacia arriba vía respiratoria (de la boca, laringe y traquea),
el laringoscopio (la articulación de la muñeca con lo cual la visualización de las cuerdas
debe permanecer inmóvil), esto hará que la vocales y la glotis se hace más factible.
epiglotis se eleve y exponga la glotis de for-
ma adecuada. La hoja recta se desliza y des-
plaza la lengua hacia la izquierda, pero requie- ELECCIÓN DEL TUBO
re maniobrar dentro de la boca para pinzar la
epiglotis y elevarla, una vez hecho esto se Escoger el tubo de mayor diámetro posible
procede a observar la glotis y deslizar el tubo para disminuir la resistencia. Los tubos que
por dentro de ella y hacia la traquea. se encuentran en el mercado parten desde
2,5 mm y aumentan 0,5 mm hasta el número
10mm de diámetro interno, y se encuentran
RESPUESTA FISIOLÓGICA con neumotaponadores conectados a un sis-
tema de insuflación que permite el sellamiento
La colocación de un elemento extraño en la de la vía aérea, evitando la entrada de secre-
vía aérea del paciente genera una serie de ciones y la salida del aire insuflado por los
respuestas fisiológicas que deben ser previs- alrededores del tubo. Para niños se debe es-
tas por la persona que lo realiza. Colocar la coger el diámetro de acuerdo a la fórmula que
hoja de laringoscopio en la faringe y especial- dice: (16 + edad) / 4, aplicable hasta los 8

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años. En las mujeres adultas un tubo 7,0- DROGAS


7,5mm es suficiente y en los hombres 8,0-
9,0mm dependiendo de la contextura física. Tiopental 3 a 5 mg/Kg o Propofol 2 a 3 mg/Kg,
La mejor forma de saber que un tubo endo- producen rápida inducción, con hipotensión, de-
traqueal está adecuadamente posicionado en presión miocárdica y vasodilatación. La Keta-
la vía aérea es mediante la capnografía (la mina 1 a 2 mg/Kg, no produce hipotensión, es
cual mide el CO2 espirado), pero es útil ver broncodilatadora, se contraindica en trauma
pasar el tubo por las cuerdas, la presencia de craneano. Midazolam, dosis de inducción de
vapor en el tubo endotraqueal, la auscultación 0,1 a 0,2 mg/Kg si no se van a usar agentes
de ruidos respiratorios bilaterales, la ausen- inductores, o preinducción de 0,02 a 0,03 mg/
cia de ruidos en abdomen; la pulsooximetría Kg (dosis para ansiolisis y amnesia). Lidocaína
y la radiografía de tórax nos ayudan a confir- 1 mg/Kg disminuye la respuesta hemodinámica
mar que el tubo está en la vía aérea. a la intubación. El uso de analgésicos opioides
tipo Fentanil 1-2 µg/Kg o Morfina 0,05-0,1 mg/
Kg es controversial y poco recomendado en el
COMPLICACIONES cuidado prehospitalario de la vía aérea; se usan
en la sala de emergencias. Succinilcolina, re-
La intubación bien realizada no trae consigo lajante neuromuscular de inicio rápido y breve
mayores riesgos y sí grandes beneficios para duración, dosis de 1 a 1,5 mg/Kg. Es necesa-
el paciente. Sin embargo, se pueden presen- rio tener otros fármacos útiles en reanimación
tar complicaciones tempranas o tardías, que como atropina y adrenalina.
pueden incluso poner en peligro la vida. En-
tre las tempranas están la hipoxia, la hiper-
capnia, las lesiones dentales, labiales, farín- VIA AÉREA QUIRÚRGICA
geas y de cuerdas vocales. Las complicacio-
nes tardías son raras y dependen generalmen- Cricotirotomia: Rara vez es necesaria, esta
te de uso prolongado del tubo endotraqueal. indicada en situaciones en las cuales los dis-
positivos antes mencionados no son efectivos
como: Obstrucción por cuerpo extraño, trauma
ERRORES COMUNES facial o laringotraqueal, hemorragia y quema-
dura de la vía aérea superior, edema angio-
Los errores más comunes que se observan neurótico, epiglotitis, y croup. Se cuenta con
durante una intubación endotraqueal son la equipos listos para su uso.
mala posición del paciente o de la persona
que realiza la maniobra (una adecuada posi- Traqueostomía: Es inusual que se requiera
ción para el intubador es que la cabeza del en este escenario. Aplican las mismas indica-
paciente quede a la altura del xifoides, en una ciones anteriores pero se incluye aquí el trau-
camilla) y mala colocación de la hoja de larin- ma laríngeo. La técnica abierta definitivamente
goscopio con desplazamiento inadecuado de trae consigo más riesgos que beneficios pero
la lengua y obstrucción por ella en la línea de puede ser una medida salvadora. Reciente-
visión. Una adecuada técnica y una práctica mente, la traqueostomía percutánea por dila-
rutinaria evitan y disminuyen estos problemas. tación se ha ido perfeccionando y se dispone
ahora de equipos listos para su uso como el
set de Ciaglia, demostrando mayor rapidez,
con menos complicaciones.

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CAPÍTULO I: MANEJO PREHOSPITALARIO DE LA VÍA AÉREA

Otras alternativas son la Ventilación Jet trans- 6. Brazier H, Murphy AW, lynch C, Bury G. Searching
traqueal con aguja y la intubación retrógrada for evidence in pre-hospital care: a review of
por punción cricotraqueal o cricotiroidea. randomized controlled trials. J Accid Emerg Med
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La atención prehospitalaria cobra cada vez committee. the care of severely injured patients in
más importancia en la sobrevida de los pa- the uk an urgent need for improvement. British
cientes en situaciones de emergencia, no solo Orthopedic Association. London, 1997.
porque logra llevarlos vivos a los servicios de 9. Bulger EM, Copass MK, Maier RV,et al. An analysis
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urgencias, sino por estabilizar y manejar a
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tiempo situaciones que de lo contrario daña- 10. Davis DP, Hoyt DB, Ochs M, et al. The benefit of
rían el pronóstico después de su ingreso. El rapid sequence intubation on head injury mortality:
oportuno cuidado de la vía aérea es pieza prin- the case controlled study. 61st annual meeting,
cipal en la obtención de buenos resultados. American Association for the Surgery of Trauma,
La escogencia de determinada técnica depen- 2002.
derá de la destreza del que auxilia, del equi- 11. Deakin, Ch. How much to do at the accident
po disponible, la causa de la emergencia, es- scene?: anesthetists are best people to provide
prehospital airway management. BMJ 2000;
tado del paciente y la ubicación. Los disposi-
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tivos diferentes al tubo endotraqueal son he- 12. Enderson J, Blane L, Powell E , Brooks R,
rramientas útiles cuyo uso necesita fácil entre- Christopher B. Rapid sequence intubation for
namiento, se aplican rápidamente y por ello prehospital airway control an safe and effective
debe ser más conocidos; pero si la situación technique. J Trauma1998; 45:1118.
requiere intubación inmediata, esta se debe 13. Frass M. The combitube: esophageal/tracheal
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30
CAPÍTULO II: TRIAGE DE CAMPO

CAPÍTULO II

Triage de campo

Roberto Martínez Duarte, MD, FCCS


Médico de Planta, Servicio de Urgencias
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN, HISTORIA Y
CONCEPTOS GENERALES

E xplosiones accidentales y atentados


terroristas continúan siendo las causas
más frecuente de desastres con múltiples he-
en este tipo de situaciones ha ocasionado po-
bres respuestas ante ataques terroristas, tal
como se vio en la explosión en Oklahoma City
ridos en nuestra sociedad. Otros tipos de de- en 1995, en el atentado con un carro bomba
sastres también tienen una incidencia signifi- en el World Trade Center en Nueva York en
cativa, como incendios, tiroteos, inundaciones, 1993 y en la destrucción de las Torres Geme-
contaminaciones con agentes químicos o las en el World Trade Center el 11 de septiem-
infecciosos, accidentes con elementos radio- bre de 2001.
activos o terremotos y, especialmente, acci-
dentes de tráfico. Muy pocos médicos tienen experiencia con
verdaderos desastres, que por definición ge-
Sin embargo, aún no hemos aprendido a pre- neran grandes cantidades de heridos, algu-
venir, anticipar y manejar efectivamente este nos de tal gravedad que sobrepasan la capa-
tipo de situaciones, ni en el ámbito prehospita- cidad de los recursos médicos de los centros
lario ni en el hospitalario. Los ataques terroris- locales. Algunas experiencias con desastres
tas casi siempre son dirigidos contra la pobla- naturales en Colombia (terremoto del Eje Ca-
ción civil, no entrenada y desprevenida. A di- fetero) y en México (terremoto de la Ciudad
ferencia de los militares, la población civil de México), señalan que los mismos centros
se halla pobremente equipada y mal prepara- hospitalarios y sus servicios de urgencias han
da para manejar las severas consecuencias quedado involucrados en las zonas afectadas,
emocionales, logísticas y médicas de una con- y que los médicos y el personal dispuesto para
flagración súbita con múltiples heridos. Es un la atención de los heridos ha muerto o se ha
blanco muy vulnerable a los efectos de un ata- sumado a la lista de heridos que requieren
que terrorista. atención inmediata, ocasionando un trastor-
no mayor en la respuesta médica ante el
Aun en los países industrializados, la inexpe- evento.
riencia y el desconocimiento de cómo actuar

31
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. FLUJO DE PACIENTES EN UNA SITUACIÓN DE DESASTRE

Rescate

Descontaminación

Triage y estabilización Inicial

Evacuación

Cuidado definitivo

Tomado de Frykberg E. Medical management of disasters and mass casualties from terrorist bombings: How can we cope? J Trauma 2002; 53:201-212.

Un incidente que resulte en el acceso súbito Un triage de pacientes se refiere a la acción


de una gran cantidad de pacientes con trau- de clasificar a los implicados en un incidente
ma mayor afecta negativamente la calidad del masivo, para que de acuerdo con criterios de
cuidado y del manejo del trauma, especial- gravedad que diferencien lo urgente de lo no
mente durante la etapa de reanimación y es- urgente, puedan recibir una atención médica
tabilización en los servicios de urgencias. El organizada y efectiva.
hospital enfrenta entonces el reto de atender
adecuadamente a un gran número de pacien-
tes generados durante un corto periodo de PATRONES DE LESIÓN,
tiempo, que crea una discrepancia entre la car- SEVERIDAD Y MORTALIDAD
ga de pacientes y los recursos disponibles.
La definición cuantitativa de un IMH (inciden- EN CASOS DE DESASTRE:
te con múltiples heridos) depende de las capa- FUNDAMENTO DEL TRIAGE
cidades de la institución receptora para aten-
der simultáneamente a determinado número Estos patrones varían de acuerdo con el tipo
de víctimas. Es así como para la capacidad de desastre. Por su severidad y frecuencia,
instalada en un centro de primer nivel de com- una de las variedades de IMH (incidentes con
plejidad, la llegada simultánea de dos pacien- múltiples heridos) más interesante es la de las
tes politraumatizados puede constituir la mis- explosiones por atentados terroristas. Anali-
ma situación de crisis que la llegada de nu- zando la casuística de los atentados con bom-
merosos heridos a un centro de mayor nivel. ba ocurridos en Beirut, se destaca que la ma-
yoría de los sobrevivientes sufrieron lesiones
Allí radica la importancia de la adecuada cla- de tejidos blandos y lesiones musculo-esque-
sificación de las víctimas de una conflagra- léticas, las cuales fueron relativamente leves
ción de acuerdo con el tipo y la gravedad de y no ponían en peligro inmediato la vida. El
sus lesiones. Esta clasificación de heridos se trauma craneo-encefálico (TCE) fue la lesión
la conoce como triage. más común (71%), pero sólamente 11% de

32
CAPÍTULO II: TRIAGE DE CAMPO

los pacientes con TCE murieron. El trauma solamente sufren lesiones de leve o modera-
de tórax, incluyendo el pulmón de explosión da severidad. Desde la perspectiva de la aten-
(blast lung) y quemaduras asociadas, que ción médica del trauma, un pequeño número
ocurrió en una pequeña proporción de los so- de pacientes que requieren acceso inmediato
brevivientes, fue la mayor causa de mortali- a centros de trauma especializados se encuen-
dad tardía (29% cada una). tra inmerso en un grupo bastante mayor de
pacientes con lesiones menos graves, quienes
Tales datos señalan la importancia del sitio pueden tolerar demoras en la atención y algún
anatómico y de la naturaleza de la lesión como grado de atención sub-óptima.
factores de pronóstico en víctimas de explo-
siones terroristas, y pueden ser útiles para En este orden de ideas, es de vital importan-
organizar la preparación de los equipos de res- cia filtrar los pacientes que presumiblemente
puesta médica que deben atender las fases habrán de evolucionar adecuadamente con el
prehospitalaria y hospitalaria. mínimo de cuidados y separarlos de aquellos
que probablemente morirán a pesar de cuida-
Las muertes inmediatas y las de aquellos que dos máximos, para concentrarse en los que
no alcanzan el cuidado médico, están relacio- pueden obtener el mayor beneficio del cuida-
nadas con la magnitud de la explosión, la ocu- do avanzado de trauma y las intervenciones
rrencia de colapso de estructuras y la locali- quirúrgicas tempranas. El objetivo principal del
zación de los explosivos en espacios cerrados. triage y de los planes hospitalarios de emer-
gencia es proveer a este limitado y seleccio-
Los atentados que producen colapso de nado grupo de pacientes severamente trauma-
estructuras ocasionan el mayor número de tizados un nivel de cuidado que se aproxime
muertes. Otro factor determinante de mortali- lo más cerca posible al nivel óptimo de aten-
dad entre las víctimas de explosiones es la ción que reciben pacientes similares en con-
ausencia de recursos médicos en la zona de diciones de servicio normales.
impacto.
Varios instrumentos para realizar triage pre-
La mayoría de lesiones corporales críticas se hospitalario han sido desarrollados con el fin
ven en las personas que mueren inmediata- de lograr la ubicación idónea de los pacien-
mente. La más común tiende a ser el TCE. tes, es decir, acorde con el nivel de compleji-
Los estudios de seguimiento en casos de aten- dad hospitalaria que demanda la naturaleza
tados terroristas muestran que el daño pul- de sus lesiones. Sin embargo, aun con el uso
monar por explosión se encuentra en alrede- de estas herramientas, sigue siendo difícil
dor de 47%, lesiones abdominales en 34% y identificar correctamente las víctimas con
otras lesiones torácicas en 25% del total de “trauma mayor” en la escena del evento.
víctimas fatales inmediatas.
Las guías desarrolladas por el Comité de Trau-
ma del Colegio Americano de Cirujanos su-
PRINCIPIOS DEL TRIAGE gieren la presencia inmediata de un cirujano
general para conducir la reanimación y trata-
En una situación típica de múltiples heridos, miento iniciales de pacientes con trauma ma-
solamente 10-15% de los sobrevivientes que- yor en el servicio de urgencias. Sin embargo,
dan seriamente lesionados (algunas series además de los cirujanos de trauma también
hablan de incidencias de 9% - 22%); el resto son necesarios otros especialistas en el equi-

33
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

po de trauma, tales como médicos de urgen- conllevan peligro de muerte. Se clasifican con
cias, ortopedistas, anestesiólogos y neuroci- color verde y constituyen cerca del 60% del
rujanos, entre otros. total de las víctimas de un incidente.

La información que aporta el triage prehospi- La otras dos categorías están conformadas
talario establece la coordinación y recepción por pacientes que son hallados muertos en
oportuna del paciente politraumatizado en el la escena del incidente, los cuales son clasifi-
servicio de urgencias, lo cual lleva a la activa- cados con el color blanco, y una última cate-
ción del equipo de trauma, de preferencia an- goría en la cual se incluyen todos los pacientes
tes de la llegada del paciente. El uso de pro- que están vivos, pero que se encuentran en
tocolos de triage estandarizados debe propen- estado crítico pero no recuperable, en quie-
der no sólo por la limitación del sub-triage de nes la gravedad de las lesiones requeriría un
pacientes seriamente politraumatizados, sino tratamiento tan intensivo y prolongado, utili-
también limitar las activaciones innecesarias zando todos los recursos disponibles, que tal
del equipo de trauma y el sobre-triage. manejo no podría realizarse sin poner en peli-
gro la vida y la supervivencia de otras víctimas
con más posibilidades de salvación. Esta cate-
CATEGORÍAS DE CLASIFICACIÓN goría se considera como expectante, debido
DEL TRIAGE a que dichos pacientes, clasificados con el
color negro, no deben recibir tratamiento has-
Hay tres categorías de triage tradicionalmen-
ta tanto no se hayan estabilizado y evacuado
te aceptadas, y dos categorías más que han
todos los pacientes que fueron clasificados
tenido algunas modificaciones y que aún no
dentro de la primera y segunda categorías (ro-
son aceptadas por todos los protocolos. Las
jos y amarillos). Ejemplos de estos pacientes
primeras son:
son aquellos que sufren lesiones craneoence-
Primero: pacientes en estado crítico que fálicas severas, fracturas abiertas de cráneo
requieren tratamiento inmediato, clasificados con protrusión de masa encefálica, arresto
con color rojo, con anomalías y lesiones que cardiaco traumático y quemaduras masivas.
ponen en riesgo inmediato la vida, tales como
hipotensión, compromiso de la vía aérea, he- Esta última categoría tipifica el cambio mental
morragias externas activas, lesiones torácicas básico y más importante que exige el manejo
abiertas o quemaduras intermedias. de IMH (incidentes con múltiples heridos) fren-
te al manejo normal del trauma, donde se debe
Segundo: pacientes graves, con lesiones que preferir dar el máximo beneficio a la gran ma-
requieren tratamiento pero en quienes una yoría de pacientes sobre el beneficio indivi-
demora en iniciar tratamiento es aceptable y dual, es decir, que el tratamiento de la pobla-
no empeora la condición clínica, es decir, no ción es más importante que el tratamiento
ponen en riesgo inmediato la vida; se clasifi- particular de los individuos. Eso implica que
can con color amarillo y corresponden a le- algunos sobrevivientes no deben ser tratados
siones como fracturas abiertas, lesiones en beneficio de la mayoría de pacientes, lo
vasculares de extremidades y lesiones de te- cual es un concepto difícil de aceptar y con-
jidos blandos de moderadas a severas. trario a nuestra formación médica regular.

Tercero: pacientes con lesiones leves que no La decisión de qué constituye una lesión ex-
requieren atención médica de urgencia y no pectante y qué no, debe ser específica para

34
CAPÍTULO II: TRIAGE DE CAMPO

cada situación, de acuerdo con el número y el cuación sin que se encuentren gravemente le-
tipo de pacientes involucrados, y los recursos sionados. Se considera un problema más ad-
disponibles para atenderlos. La implementa- ministrativo, logístico y económico bajo con-
ción de este concepto requiere planeación diciones de rutina, debido a que recursos cos-
previa y conocimiento de los principios del tria- tosos y equipos de trauma especializados son
ge en incidentes con múltiples heridos. empleados sin verdadera necesidad. Usual-
mente una tasa de sobre-triage de 50% es el
precio a pagar para reducir las tasas de sub-
SUB-TRIAGE Y SOBRE-TRIAGE triage a cero y evitar pasar por alto lesiones
que deben ser atendidas rápidamente.
Sub-triage se refiere a la clasificación de pa-
Sin embargo, en casos de IMH (incidentes con
cientes críticos en categorías inferiores y que
múltiples heridos), es razonable postular que
tendrán demoras en el inicio del manejo defi-
el sobre-triage puede ser tan peligroso como
nitivo, lo cual produce aumento de las muer-
el sub-triage, porque la inundación y sobre-
tes prevenibles. Estos casos deben siempre saturación de los servicios de urgencias con
ser evitados por medio del entrenamiento y grandes volúmenes de pacientes no críticos
capacitación continuos y adecuados de los que arriban simultáneamente puede interferir
oficiales de triage, que les permita el recono- con la detección y el manejo oportuno de la
cimiento rápido de lesiones potencialmente pequeña minoría de pacientes realmente crí-
fatales. Los reportes de varios atentados te- ticos, poniendo en riesgo su supervivencia.
rroristas han demostrado que este objetivo ha Por esto se acepta actualmente que la preci-
sido logrado, al no haberse informado casos sión del triage es uno de los factores determi-
de sub-triage en la literatura. nantes en el pronóstico de los pacientes en
estado crítico.
Sobre-triage se refiere a la proporción de so-
brevivientes asignados a categorías críticas, Sobre este aspecto también intervienen otros
por lo cual reciben cuidado inmediato y eva- factores que se enumeran en la Tabla No. 2.

TABLA No. 2. FACTORES QUE AFECTAN EL PRONÓSTICO DE LAS VÍCTIMAS LUEGO DE UN ATENTADO TERRORISTA

Magnitud de la explosión
Colapso de estructuras
Precisión del triage
Tiempo transcurrido desde el evento hasta el inicio del tratamiento
Explosión al aire libre versus explosión en espacios cerrados
Escenarios urbanos versus escenarios rurales/aislados
Lesiones anatómicas
Presencia inmediata de cirujanos

Tomado de Frykberg E. Medical management of disasters and mass casualties from terrorist bombings: How can we cope? J Trauma 2002; 53:201-212.

35
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRIAGE EN EL AMBIENTE tección del personal de salud en la escena


PREHOSPITALARIO del accidente debe ser una prioridad máxima
dentro del manejo del incidente con múltiples
Aunque no forma parte de los objetivos de la heridos.
presente guía hacer una descripción detalla-
da, es imposible hablar de triage prehospitala- El triage prehospitalario debe ser realizado en
rio sin mencionar los conceptos básicos de se- lo posible dentro de grandes áreas abiertas o
guridad en la escena que deben comandar la cerradas, dependiendo de las condiciones es-
actuación de todos los equipos de respuesta pecíficas del incidente. El oficial de triage debe
médica o no médica en el sitio del evento. tener experiencia y capacitación en la identifi-
cación rápida de lesiones críticas que requie-
Numerosos eventos ocurridos en Colombia y ren manejo inmediato, y en la exclusión de pa-
en otros países ilustran la importancia de so- cientes que no cumplen con esta característica.
portar y proteger los equipos de respuesta mé- Igualmente, debe conocer perfectamente los
dica, manteniéndolos alejados de la escena del principios del triage y del manejo inicial de de-
evento y de las áreas de alto riesgo de ataque sastres, para asegurar una adecuada clasifi-
posterior o de colapso de estructuras. En varios cación de las víctimas y utilizar los limitados
eventos terroristas se han utilizado explosiones recursos médicos más eficientemente.
secundarias dirigidas a lesionar a los curiosos,
a los primeros que responden y a los equipos Se ha encontrado que el sobre-triage se mini-
de respuesta especializada que acuden a in- miza cuando los médicos realizan el triage pre-
tervenir en la escena de la primera explosión. hospitalario y se incrementa cuando personal
Los terroristas han aprendido que este tipo de no médico ejerce este rol. En cuanto a los cri-
acciones genera más miedo, terror y mayor nú- terios para realizar el triage, los estudios mues-
mero de lesionados, y se ha convertido en un tran que los de tipo fisiológico y anatómico son
patrón que todos los equipos de respuesta mé- superiores a los basados en mecanismos del
dica o no médica (bomberos, policía, ejército, trauma en cuanto a la reducción del sobre-
equipos de respuesta voluntarios) deben prever triage, sin crear riesgos de sub-triage.
y controlar antes de ingresar en la zona de im-
pacto para realizar el primer triage de campo. Logrado el rescate, el paciente es trasladado
al MEC (módulo de estabilización y clasifica-
Los sitios o módulos para la realización del ción), donde se realiza la clasificación de su
triage deben estar localizados a una distan- estado clínico y una estabilización rápida con-
cia segura de la zona caliente o zona roja, a centrada en el control de hemorragias, alinea-
la cual sólo deben tener acceso los equipos ción e inmovilización de fracturas, limpieza y
de rescate experimentados y dotados con los cubrimiento de heridas abiertas.
materiales de ataque necesarios para prote-
ger la integridad física del personal de resca- Antes de la llegada al hospital, e incluso an-
te. Estos grupos de avanzada se desplazan tes de subir el paciente a la ambulancia, debe
con los heridos hasta la zona tibia o zona na- realizarse la descontaminación de sustancias
ranja, donde se encuentra el personal que reci- químicas, radioactivas o biológicas, si es el
ba los pacientes y los transporte a los módu- caso. Durante este proceso deben extremar-
los de estabilización y clasificación (MEC) se las medidas de protección y de biosegu-
ubicados en la zona fría o zona verde, libre ridad de todo el personal de salud o de resca-
de peligro para los equipos de salud. La pro- te en contacto con el paciente.

36
CAPÍTULO II: TRIAGE DE CAMPO

En el MEC y durante la realización del triage Diversos estudios han sometido a prueba los
no se deben realizar tratamientos mayores, criterios de triage de pacientes en eventos
salvo las medidas iniciales comentadas ante- traumáticos no necesariamente relacionados
riormente. El jefe de triage debe contar en la con múltiples víctimas, y de sus resultados se
escena con el soporte de un oficial de trata- puede concluir que el criterio más adecuado
miento que se encargue directamente de la es una presión sistólica por debajo de 90
ejecución de manejos salvadores en cada le- mmHg (precisión de 86% para detectar lesio-
sionado. De esta manera se asegura la ade- nes mayores). El siguiente criterio más ade-
cuada permanencia en sus funciones del jefe cuado fueron las quemaduras de segundo o
de triage, quien continúa concentrándose en tercer grado mayores de 15% de la superficie
su labor de clasificación de heridos. corporal total (precisión de 79%), seguido por
la escala de coma de Glasgow menor o igual
Un método sistemático de distribución de los a 12 (precisión de 78%), frecuencia respirato-
heridos debe tenerse en cuenta en el momen- ria menor de 10 x min o mayor de 29 x min
to de remitir los pacientes desde el MEC a los (precisión de 73%). La escala de coma de
diferentes hospitales de acuerdo con el nivel Glasgow fue el indicador más confiable de
de severidad y los recursos disponibles para trauma mayor en niños, comparado con adul-
la atención, evitando la sobrecarga de los hos- tos (78% vs. 52% p<0,01).
pitales más cercanos. En algunos casos se
debe decidir sobre el mejor método de trans- La gran mayoría de protocolos de—triage in-
porte y de evacuación de los heridos: sólo trans- corporan algún grado de evaluación neuroló-
porte terrestre, sólo trasporte aéreo o ambos. gica del paciente. Sin embargo, sólo 39-44%
de los casos que fueron llevados por equipos
En el MEC debe definirse rápidamente el cri- prehospitalarios especializados a una central
terio que se utilizará para clasificar los pacien- de trauma en Estados Unidos tuvieron algún
tes críticos no recuperables, dependiendo de registro del puntaje de dicha escala. Por ello
las condiciones del evento, del número de heri- se ha sugerido que con la simple aplicación
dos y de la capacidad instalada del sistema del componente motor de la escala se puede
de salud. Pacientes que no respondan debe- evaluar adecuadamente el grado de compro-
rán ser asumidos como muertos y no deben miso neurológico del paciente.
ser resucitados en primera línea. Compresio-
nes torácicas y toracotomías de urgencia de- El Colegio Americano de Cirujanos/Comité de
ben ser olvidadas en este contexto. Trauma publicó en 1999 los criterios mínimos
para seleccionar pacientes que requieren
resucitación por trauma mayor:
ALGORITMOS PARA TRIAGE EN INCIDEN-
TES CON MÚLTIPLES HERIDOS 1. Tensión arterial sistólica confirmada <90
mmHg en adultos y cualquier cifra de hipo-
La mayoría de los esquemas de triage caben den- tensión relacionada con la edad en pacien-
tro de una de las siguientes cuatro categorías: tes pediátricos.
2. Compromiso respiratorio/obstrucción y/o
1. Criterios fisiológicos. intubación.
2. Mecanismos de lesión. 3. Glasgow <8 atribuible al trauma.
3. Sitio anatómico de la lesión. 4. Heridas por arma de fuego en el abdomen,
4. Paciente de alto riesgo. cuello o tórax.

37
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

5. Traslado del paciente desde otro hospital alto valor predictivo: el Índice Prehospitalario
recibiendo transfusión de sangre para (PHI) y los puntajes por mecanismo de lesión
mantener los signos vitales. (MOI), para determinar si al utilizarse combi-
6. Concepto del médico especialista en urgen- nadas se incrementaba la sensibilidad, espe-
cias. cificidad y valores de predicción de los punta-
jes individuales. El parámetro de referencia
Un paciente que cumpla al menos con los 4 utilizado fue el Puntaje de Severidad de la Le-
primeros criterios muy seguramente tiene sión (ISS), el cual ha sido estadísticamente
lesiones de alto potencial letal, y los que cum- correlacionado con mortalidad. Encontraron
plen todos estos criterios tendrán lesiones más que la combinación de las dos escalas fue
severas y hospitalizaciones más prolongadas. significatívamente mejor que el puntaje basa-
do en criterios fisiológicos y marginalmente
mejor que el puntaje basado en mecanismo
ALGUNOS ESTUDIOS HAN EVALUADO de lesión para predecir pronóstico de lesio-
COMBINACIONES DE DIFERENTES nes en al ambiente prehospitalario.

índices de trauma buscando mejorar su sen- Dentro de los algoritmos disponibles para rea-
sibilidad y especificidad. Bond et al (1997) rea- lizar triage en ambientes prehospitalarios se
lizaron una combinación de dos escalas con encuentran los siguientes:

TRIAGE SIEVE

s Prioridad 3
Camina?
(verde)
n

Vía Aérea n Muerto


despejada? (blanco)

s
Menos de 10 o
Frecuencia más de 29 Prioridad 1
Respiratoria (rojo)
Entre
10 y 29 Más de 2 seg.

Llenado Prioridad 2
Capilar Menos de 2 seg. (amarillo)

Tomado de Garner A, Lee A, Harrison K, Schultz C. Comparative analysis of multiple-casualty incident triage algorithms. Ann Emerg Med 2001; 38:541-8.

38
CAPÍTULO II: TRIAGE DE CAMPO

START Y START MODIFICADO:


TRIAGE SIMPLE Y TRATAMIIENTO RÁPIDO

Es utilizada principalmente en Norteamérica. En el algoritmo modificado, se sustituye la pal-


Valora la capacidad para obedecer órdenes, pación del pulso radial por la velocidad de lle-
frecuencia respiratoria y llenado capilar para nado capilar, el cual parece ser un dato más
asignar la categoría de gravedad. confiable.

¿Camina? s Prioridad 3
(verde)

n s
¿Respira?

Abra la VA, s s
¿respira ¿Más de 30 x min?
ahora?

Prioridad 1 n ¿Pulso
Insalvable radial
(rojo)
presente?

n ¿Obedece s
órdenes?

Prioridad 1 Prioridad 2
(rojo) (amarillo)

VA = Vía aérea

Tomado de Garner A, Lee A, Harrison K, Schultz C. Comparative analysis of multiple-casualty incident triage algorithms. Ann Emerg Med 2001; 38:541-8.

39
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRIAGE CAREFLIGHT

Camina? Prioridad 3
s (verde)
n

s ¿Obedece n
órdenes?

n s ¿Respira con la
¿Pulso radial
apertura de la
palpable?
VA?
s
n

Prioridad 2
Prioridad 1 Insalvable
(amarillo)
(rojo) (negro)

VA = Vía aérea
Tomado de Garner A, Lee A, Harrison K, Schultz C. Comparative analysis of multiple-casualty incident triage algorithms. Ann Emerg Med 2001; 38:541-8.

En el estudio de Garner et al se hizo un análi- tes son cualitativas y no cuantitativas. En


sis comparativo de todos los algoritmos en aquellos que no pueden caminar, la prioridad
1.144 pacientes para determinar cómo se com- se evalúa simplemente preguntando algo
portaban en situaciones de desastre con múl- (como ¿dónde tiene dolor?, por ejemplo) mien-
tiples víctimas. Todos los algoritmos utilizan la tras que simultáneamente se evalúa la pre-
habilidad para caminar como un factor discrimi- sencia de pulso. Este algoritmo requiere no
nador entre lesión menor o no lesión. El predic- más de 15 segundos por paciente. Sin em-
tor fisiológico de mayor asociación con lesio- bargo, al no evaluar la frecuencia respirato-
nes críticas fue el componente motor de la es- ria, puede fallar en la identificación de pacien-
cala de coma de Glasgow y la presión sistólica. tes con lesiones aisladas de la vía aérea en
Estos hallazgos se corroboran con los resulta- escenarios tales como exposición masiva a
dos de otros estudios (Garner et al, 2001). contaminantes químicos, donde un alto núme-
ro de pacientes pueden presentar sólamente
En su estudio se encontró que la metodolo- síntomas respiratorios, con completa norma-
gía de Triage Sieve fue un pobre factor de pre- lidad de los demás parámetros. Los autores
dicción de severidad de la lesión en compa- concluyen que aunque el triage CareFlight
ración con los demás algoritmos. El algoritmo parece tener una mayor especificidad, no se
CareFlight es el más rápido de realizar en el ven diferencias significatívas entre el START,
medio prehospitalario porque sus discriminan- el START modificado y el triage Care Flight.

40
CAPÍTULO II: TRIAGE DE CAMPO

REGISTROS MÉDICOS así como para la evaluación retrospectiva de


los planes de emergencia.
La documentación escrita de los hallazgos e
intervenciones realizadas a las víctimas en el Esos registros deben atarse al paciente (no a
área de desastre es de vital importancia para la ropa) para evitar que se extravíen durante
permitir la continuidad del cuidado médico, la el transporte y la ubicación en los centros hos-
ubicación y seguimiento adecuado de los pa- pitalarios. Se sugiere la colocación de los re-
cientes, el control de las actividades realiza- gistros en materiales plásticos para proteger-
das en el MEC y para evitar tratamientos y los del clima y del contacto con líquidos, san-
triage redundante. gre o sustancias contaminantes. Los formatos
deben ser conocidos por el personal de salud
Luego de finalizar las operaciones del MEC, con anterioridad, para evitar errores o incon-
tales registros pueden utilizarse para la eva- sistencias en el diligenciamiento y para aho-
luación post-evento y la organización adminis- rrar tiempo en el sitio del evento mientras se
trativa de los pacientes atendidos y remitidos, aprende a utilizar las formas.

TABLA 3. FACTORES DETERMINANTES PARA EL USO ÉTICO DE LOS RECURSOS DISPONIBLES

Factores a considerar Factores que no se deben considerar


Posibilidad de beneficio Edad, raza, etnia o sexo
Efecto positivo sobre la calida de vida Talentos, habilidades, discapacidades o deformidades
Duración del beneficio Status socioeconómico, valencia laboral o posición política
Urgencia de la condición del paciente Condiciones coexistentes que no afecten el pronóstico
del paciente
Efecto multiplicador del personal de urgencias (valía del Abuso de alcohol o drogas
personal de urgencias por su habilidad para ayudar a otros)
Cantidad de recursos requeridos para un tratamiento exitoso Comportamiento antisocial o agresivo

LECTURAS RECOMENDADAS

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42
CAPÍTULO III: REANIMACIÓN PREHOSPITALARIA

CAPÍTULO III

Reanimación Prehospitalaria

Laureano Quintero, MD
Médico Cirujano Universidad Javeriana
Instructor BLS - ACLS American Heart Association, FIC,
Consejo Nacional de Resucitación, Colombia
Jefe de Urgencias Hospital Universitario del Valle, Cali

E n los entrenamientos PHTLS (Soporte


Prehospitalario en Trauma, Asociación
Nacional Técnicos en Emergencias Médicas
porte en experiencias y estudios debidamen-
te evaluados.

USA), se tiene como prioridad inicial la se-


cuencia sistemática de “las tres S”: Seguridad Esquema “A - B - C - D Primario”
de quien interviene y de su equipo antes de
cualquier maniobra; valoración cuidadosa de Ante una situación de emergencia cardiores-
la escena (Scene) para determinar lo que piratoria o de colapso cardiovascular, es reco-
exacta o aproximadamente ocurrió; y determi- mendable asumir una secuencia de reacción
nación de la situación para establecer cuántas que evite omisiones y prevenga errores que
víctimas reclaman atención. podrían determinar exceso de intervención o
intervenciones incompletas.
La posibilidad de atender víctimas de emer-
gencia cardiocoronaria va mucho mas allá de
los escenarios de trauma. Es conveniente 1. Contacto
cumplir de rutina las siguientes pautas, antes
de abordar cualquier escena en la que una Establezca siempre en primer lugar la res-
persona necesite atención prioritaria: puesta al llamado o la falta de ella. Colóquese
• Bioseguridad (Protección personal con len- al lado del paciente, haga contacto firme con
tes, guantes y tapabocas). sus manos en el hombro o el tórax y llámelo
• Seguridad personal y del equipo. con tono de voz fuerte y claro: “¿Qué le ocu-
• Seguridad para el paciente. rre? Abra los ojos por favor”.
• Protección o aseguramiento de testigos
presenciales en la medida posible. Omitir este sencillo pero significativo paso lle-
• Determinación de la naturaleza del proble- va al riesgo de iniciar intervenciones suponien-
ma (Es trauma o no es trauma?). do que existe paro cardiorrespiratorio cuando
• Necesidad de recursos adicionales (Si son solamente se trata de inconsciencia transitoria
necesarios, solicitud especifica de apoyo). o incluso de alguien que sí responda al llamado.

Los esquemas recomendados para abordar En caso de sospecha de trauma, evite sacudir
sistemáticamente la Reanimación tienen so- bruscamente al paciente y tome medidas para

43
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

evitar movilización inadecuada de la columna pulmonar avanzado (Desfibrilador convencio-


vertebral cervical. nal, medicamentos de paro, laringoscopio,
tubos ortotraqueales, etc.).
Tome siempre medidas de bioseguridad que
eviten riesgos de contaminación. Utilice lentes, Tras hacer contacto y solicitar apoyo al siste-
guantes y tenga a mano dispositivos de barre- ma de emergencias proceda al siguiente paso.
ra que eviten contacto directo con la vía aérea
y con las secreciones potencialmente conta-
minantes del paciente. 3. Posición Adecuada del Paciente
y del Reanimador
2. Active el Sistema de Respuesta, Ubíquese a un lado del paciente, asegúrese de
evite Trabajar Solo que se encuentra a adecuada altura. Las com-
presiones cardiacas que tal vez deba proporcio-
Cuando compruebe que se enfrenta a una per- nar, requieren poner sus brazos en ángulo rec-
sona que no responde al llamado, llame a su to a 90 grados con respecto al paciente. Si us-
equipo de trabajo con el código adoptado por ted está muy alto o muy bajo con respecto a la
su institución, si es el caso. No genere caos, víctima, se verá obligado a asumir posiciones
angustia, desorden ni desperdicio de recursos. inadecuadas e inefectivas para el éxito de la ma-
niobra. En casos especiales usted tendrá inclu-
Utilice el teléfono para activar la respuesta de so que llevar hasta el piso a su paciente.
emergencia, proporcione en forma calmada,
datos de utilidad primordial: El paciente debe estar en decúbito supino, se
1. Lugar exacto de la emergencia (Dirección, protege la columna vertebral y se evitan algu-
número de oficina o de local, referencias nas maniobras si hay sospecha o confirma-
útiles para ubicación, etc.). ción de lesión raquimedular.
2. Número telefónico desde el que usted
llama.
3. Descripción global y concreta de la situa- 4. Proceda al ABCD Primario
ción (¿Qué sucede exactamente?).
4. Número de personas que necesitan ayuda. A. VÍA AÉREA. EL PACIENTE RESPIRA
5. Condición de la(s) víctima(s). O NO RESPIRA?
6. Maniobras que usted realiza en el momen-
to (RCP básico, por ejemplo). Evalúe la vía aérea. Ábrala, extraiga cualquier
7. Siempre solicite permiso para colgar, ase- cuerpo extraño que sea evidente y verifique
gurándose así que no se requiere mas in- si hay respiración espontánea adecuada. Si
formación desde la central de despacho. hay secreciones abundantes o material liqui-
do, aspire la cavidad oral.
Todo grupo de intervención prehospitalaria de-
be contar por lo menos con equipos de sopor- En caso de inconsciencia, el tono muscular
te básico de vida (cánulas orofaríngeas, naso- se hace insuficiente y la lengua tiende a ir ha-
faríngeas, dispositivos de barrera, dispositivos cia atrás ocluyendo la vía aérea. La inserción
bolsa válvula mascara y ojalá desfibrilador de la lengua en el maxilar inferior permite que
automático externo) y con posibilidades de al desplazarlo hacia delante aquella se aleje
acceso rápido a equipos de soporte cardio- de la pared posterior y despeje “el camino”.

44
CAPÍTULO III: REANIMACIÓN PREHOSPITALARIA

En este paso, evite apoyarse en los tejidos por vómito y aun por la lengua. Se utiliza el
blandos submentonianos porque puede obs- decúbito lateral modificado, con los siguien-
truir la vía aérea. tes principios:
• La víctima debe estar tan cerca del decú-
Si no hay sospecha de trauma craneoencefá- bito lateral completo como sea posible, con
lico o cervical, coloque una de sus manos en la cabeza en declive para permitir el libre
la frente del paciente y la otra en el mentón; drenaje de líquidos.
extienda suavemente la cabeza hacia atrás y • La posición debe ser estable.
eleve el mentón. • Debe evitarse cualquier presión sobre el
tórax que dificulte la respiración.
Si sospecha o confirma trauma craneoence- • Debe permitir la rápida vuelta al decúbito
fálico o raquimedular proceda a la maniobra supino protegiendo la columna vertebral
de tracción mandibular manteniendo en posi- cervical.
ción neutra la columna cervical. Para esto, co- • Debe ser posible buena observación, con-
loque una mano a cada lado de la cabeza del trol y abordaje de la vía aérea en caso ne-
paciente, apoye los codos sobre la superficie cesario.
en la que descansa este, sujete los ángulos • Pasados 30 minutos o si en menor tiempo
del maxilar inferior y elévelos con ambas ma- no se detecta buena perfusión de la extre-
nos desplazando la mandíbula hacia delante. midad superior ubicada bajo el paciente,
Si al ejecutar esta maniobra los labios se cie- se debe girar hacia el otro lado.
rran, utilice el pulgar para abrirlos.
Si el paciente no respira o hace esfuerzos
Una vez abierta la vía aérea, sea con la manio- débiles o inadecuados para respirar, se nece-
bra cabeza mentón o con la tracción mandi- sita rápida intervención con maniobras que
bular, proceda a determinar si el paciente está brinden apoyo efectivo.
respirando: acerque su oreja a boca y nariz del
paciente dirigiendo su mirada hacia el tórax y
el abdomen, determine visualmente si se mue- B. BUENA RESPIRACIÓN.
ven con la respiración; si siente el aire espira- INICIE RESPIRACIÓN DE APOYO.
do en la oreja que coloca cerca de boca y na-
riz; y si escucha la respiración de la víctima; Si el paciente no respira, se procede a ofrecer
esta maniobra toma entre 7 y 10 segundos. medidas que apoyen este componente vital.

Si el paciente respira adecuadamente y no res- La respiración boca a boca es una manera


pondió al llamado, se trata de una víctima in- rápida y efectiva para suministrar alguna frac-
consciente que requiere atención especial ción de oxígeno, ya que el aire espirado contie-
y manejo integral por el equipo de emergen- ne suficiente oxígeno para satisfacer las ne-
cias. Se debe proteger del riesgo de bronco cesidades de soporte. Debe mantenerse
aspiración y determinar las causas y el manejo abierta la vía aérea del paciente, ocluirle la
de la inconsciencia. Las personas inconscien- nariz y hacer un sello en su boca con la boca
tes y en decúbito supino están en una condi- del reanimador; tras una inspiración profunda
ción muy vulnerable y peligrosa. Sus reflejos se insufla en forma lenta, por dos segundos
de deglución están muy limitados y se confi- cada vez, comprobando visualmente que el
guran riesgos claros de bronco aspiración y tórax se expande con cada insuflación y pro-
obstrucción de la vía aérea por secreciones, gramando una ventilación cada 4 a 5 segun-

45
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dos de manera que se ofrezcan de 10 a 12 gua. Para proporcionar ventilaciones, el ope-


respiraciones por minuto; debe tenerse en rador debe ocluir la nariz de la víctima y apo-
cuenta que la respiración boca a boca implica yar la boca alrededor de la abertura central
el riesgo calculado de insuflación gástrica, manteniendo la posición de elevación mento-
regurgitación, bronco aspiración y neumonía niana o la tracción mandibular según el caso.
posterior a esta; para reducir el riesgo de in-
suflación gástrica se suministran ciclos len- Para proporcionar soporte ventilatorio inicial
tos con el volumen corriente mínimo necesa- también se tienen dispositivos bolsa - válvula
rio para lograr expansión torácica visible cada - mascarilla con volumen alrededor de 1600
vez. Esto implica proporcionar unos 10 ml/k ml. Son más fáciles de usar cuando actúan
en el adulto (unos 700 a 1000ml) en un lapso simultáneamente dos reanimadores porque
de dos segundos. (Nivel de evidencia IIA). evitan escapes y dificultades para lograr el
volumen corriente deseado.
Si los intentos de ventilación no son efectivos,
es decir, no se logra expansión torácica visible, Como la lengua puede ser obstáculo para el
la causa mas común es la posición incorrecta adecuado flujo de aire, es recomendable co-
de la cabeza y el mentón. Corrija dicha posi- locar cánula orofaríngea antes de usar el dis-
ción e intente de nuevo las ventilaciones. Si positivo bolsa válvula máscara. Si se cuenta
aun con excelente posición no lo logra consi- con un tercer reanimador, mientras dos ma-
dere de inmediato la posibilidad de obstruc- niobran el dispositivo bolsa válvula máscara
ción de vía aérea por cuerpo extraño y proce- el otro aplica presion cricoidea suave pero fir-
da de acuerdo con los protocolos para ello. me, de tal forma que prevenga insuflación
gástrica y los riesgos mayores de regurgitación
Si una persona no desea o no está capacita- y aspiración. Esta presión solamente se apli-
da para practicar ventilación boca a boca en ca en pacientes inconscientes.
un adulto, debe practicar por lo menos RCP
con compresiones mientras llega la ambulan-
cia o mientras hace el traslado. C. CIRCULACIÓN. VERIFIQUE EL PULSO.
DE ACUERDO CON SUS HALLAZGOS,
Los Dispositivos de Barrera se clasifican en INICIE COMPRESIONES
dos grupos: Dispositivos boca-mascarilla y
mascarillas faciales protectoras. Iniciado el soporte respiratorio con dos a cin-
co insuflaciones, se procede a valorar el com-
Los dispositivos boca-mascarilla cuentan con ponente circulatorio. La ausencia de pulso in-
una válvula unidireccional que permite el paso dica paro cardiaco y necesidad de practicar
del aire desde el reanimador a la víctima pero compresiones torácicas; palpar el pulso no es
evita el reingreso del aire espirado desde el maniobra fácil, como prueba diagnóstica de
paciente hacia el reanimador. paro cardiaco tiene limitaciones en cuanto a
sensibilidad, exactitud y especificidad. Rl rea-
Las mascarillas faciales protectoras se nimador debe tomarse de 5 a 10 segundos
componen solo de una lámina transparente para determinar si hay pulso. Se recomienda
de plástico o silicona. La abertura debe colo- que además del pulso, los reanimadores veri-
carse sobre la boca del paciente. Algunos fiquen si existen o no signos de circulación:
modelos tienen un tubo corto que debe intro- respiración, tos o movimiento; si un paciente
ducirse en la boca del paciente, sobre la len- no respira, no tose o no se mueve y además

46
CAPÍTULO III: REANIMACIÓN PREHOSPITALARIA

no se detecta pulso, se deben iniciar manio- micas (colocar los electrodos del DEA después
bras de compresión torácica. de retirar estos parches), pacientes con mar-
capasos implantados (colocar los electrodos
El lugar indicado para verificar el pulso es la del DEA lejos del marcapasos).
arteria carótida del lado más cercano al rea-
nimador: mantenga extendida la cabeza del
paciente con una mano sobre la frente (si no RESUMEN DE LA SECUENCIA
hay contraindicación por trauma); localice el CRITICA INICIAL
cartílago tiroideo; deslice dos dedos en el sur-
co entre la traquea y los músculos laterales Al detectar o sospechar una situación de co-
del cuello; aplique presión suave a fin de no lapso cardiorrespiratorio, los pasos que de-
colapsar la arteria; concentre su atención en ben seguirse son:
detectar durante cinco a diez segundos si hay • Contacto con el paciente.
o no pulso palpable. Si no hay pulso palpable • Activación del Sistema de Emergencia por
inicie compresiones torácicas. el mecanismo determinado en la comuni-
dad si el paciente no responde (El momento
Las recomendaciones actuales sugieren una y la forma variarán ampliamente de acuer-
frecuencia de 100 compresiones por minuto do con la realidad regional)
(Clase IIb) para lograr un flujo sanguíneo ante- • Aplicación del ABCD primario:
rogrado adecuado durante la RCP; la relación A: Vía Aérea: El paciente Respira o no
entre insuflaciones y compresiones en los respira
adultos debe ser de 15 compresiones por 2 B: Buena respiración: Si no respira ofrezca
insuflaciones, ya que esta secuencia permite de dos a cinco ventilaciones de soporte
practicar mas compresiones torácicas por mi- de acuerdo con el protocolo local.
nuto. Las compresiones deben practicarse en C: Circulación. Determine si hay pulso o
la mitad inferior del esternón (a la altura de signos circulatorios. Si no hay pulso ni
las tetillas), los brazos del reanimador en án- signos de circulación inicie compresio-
gulo de 90 grados con respecto al tórax del nes en secuencia 15:2 es decir, 15 com-
paciente, evitando doblar los codos y depri- presiones por dos ventilaciones.
miendo el tórax una tercera parte de su diá- D: Desfibrilación. Determine si hay Fibrila-
metro con cada compresión. ción Ventricular o Taquicardia Ventricular
sin pulso. Si es así, proceda a desfibrilar
e inicie el ABCD secundario. Si no hay
D. DESFIBRILACIÓN Fibrilación Ventricular , continúe RCP e
inicie el ABCD secundario.
Los desfibriladores (DEA) se consideran apa-
ratos de frecuente aplicación y deben hacer Para este paso existe la alternativa de acuer-
parte de las alternativas de reacción en la do con el escenario, de usar DEA o desfibri-
escena prehospitalaria. lador convencional.

No han sido avalados para uso en menores


de ocho años de edad y deben tenerse precau- 5. El ABCD Secundario
ciones en situaciones especiales como pa-
cientes mojados (secarlos y alejarlos del El paciente puede continuar en paro cardiores-
agua), pacientes con medicaciones transdér- piratorio a pesar de las maniobras del ABCD

47
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

primario y de la eventual descarga desfibrila- organícelo, preoxigene y proceda con tranqui-


dora que se le administre. lidad.

La aplicación de maniobras de la secuencia El patrón universal para el manejo de la vía


secundaria requiere personal entrenado, ya aérea ha sido el tubo orotraqueal pero hoy se
que la destreza requerida y el nivel de respon- recomiendan opciones adicionales que inclu-
sabilidad médica y legal que se establecen son yen la mascara laríngea y el combitubo.
de mayor envergadura. Si existen códigos de
respuesta organizados, quien asume el lide- Quien practica intubación parte del principio
razgo no tendrá que emitir ordenes sino veri- de que sabe hacerlo y tiene suficiente expe-
ficar que estas se cumplan adecuadamente. riencia; para ello:
Cada integrante del equipo conoce su papel
y debe desempeñarlo adecuadamente. • Prepare el equipo. Corrobore que el balón
del tubo se encuentra en buen estado.
El tipo de ABCD secundario dependerá ente- • Preoxigene 20 a 30 segundos con disposi-
ramente de la normatividad local y regional y tivo bolsa válvula mascarilla. Si hay respi-
del equipo que lo practica. Si en la región o ración espontánea, la preoxigenación se
en el sistema de emergencias no hay autoriza- puede lograr administrando alto flujo de
ción para maniobras como intubación o si el oxígeno durante tres minutos (siempre y
equipo no es médico, no hay autorización legal cuando exista buen volumen corriente).
en Colombia para que otro tipo de personal • Aspire en caso necesario, no más de diez
aplique medicamentos. En dichos casos, el segundos.
equipo se limita al ABCD primario, incluyendo • Oxigene nuevamente.
uso del DEA si hay opción y a traslado rápido • Intube utilizando el laringoscopio con la
al hospital adecuado mas cercano. mano izquierda y manipulando el tubo con
la derecha.
Una vez que el equipo ha efectuado los pasos • Infle el balón.
iniciales, si persiste la condición de colapso
es necesaria la aplicación de nuevas medi-
das secuenciales críticas: intubación, verifica- B. BUENA VENTILACIÓN. CONFIRME SIEMPRE
ción de adecuada intubación, canalización de LA CORRECTA POSICIÓN DEL TUBO Y LA
una vena, monitorización continua y estable- VENTILACIÓN ADECUADA
cimiento del diagnóstico diferencial.
Nunca será suficiente la insistencia para que
el equipo de intervención se asegure siempre
A. VÍA AÉREA: ASEGURE LA VÍA AÉREA; del resultado adecuado de la intubación:
SI ESTA INDICADO INTRODUZCA UN
DISPOSITIVO • Ausculte en primera instancia el epigastrio y
verifique si el tórax se expande al insuflar a
Si es adecuado el soporte con dispositivo bol- través del tubo con dispositivo bolsa válvula.
sa válvula mascarilla, utilizando cánula oro fa- Si escucha gorgoteo gástrico y no hay ex-
ríngea, presión cricoidea y frecuencia adecua- pansión torácica se supone que la intubación
da, puede no ser necesario intubar de inmedia- es esofágica y se retira el tubo de inmediato.
to; no se precipite desordenadamente, solicite • Una vez retirado el tubo, intentar nueva
equipo de intubación si no lo tiene a mano, intubación luego de preoxigenar por 15 a

48
CAPÍTULO III: REANIMACIÓN PREHOSPITALARIA

30 segundos con dispositivo bolsa válvula, • Inyecte el medicamento a través del catéter.
administrando oxígeno al 100%. Nunca se • Lave el catéter con 10 ml de solución salina.
debe usar el mismo tubo que llegó al esó- • Conecte de inmediato la bolsa de ventila-
fago, por el riesgo de infección. ción al tubo traqueal y ventile enérgicamen-
• Si se detectan sonidos adecuados en am- te 3 a 4 veces.
bos hemitórax, corroborados por juiciosa
auscultación comparativa en ápices, axilas
y bases, fijar el tubo de tal forma que no se D. ESTABLEZCA DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
desplace. El tubo debe pasar 1 a 2 cm mas Y TRATE EN CONSECUENCIA
allá de las cuerdas vocales.
• Una vez fijado el tubo, colocar cánula orofa- Repase los eventos e intente determinar qué
ríngea para evitar mordedura del tubo y ha ocurrido:
conectar a fuente de oxígeno o al disposi- • ¿Qué ocasionó el colapso cardiovascular?
tivo escogido. • ¿Por qué no hay respuesta?
• ¿Qué otras causas se deben considerar?
• ¿Se ha efectuado todo el ABCD primario y
C. CIRCULACIÓN. CANALICE UNA VENA. secundario o se ha omitido algún paso?
NO OLVIDE MONITORIZAR
CONSTANTEMENTE AL PACIENTE
SECUENCIAS DE INTERVENCIÓN FRENTE
Coloque los electrodos y conecte el monitor, AL PARO CARDIORESPIRATORIO, DE
controle la evolución del ritmo y correlacione ACUERDO CON EL RITMO CARDIACO
éste siempre con la condición del paciente. DETECTADO

Si hay pulso palpable determine la presión Cuando se detecta en el electrocardiograma


arterial. que no existe complejo QRS normal, hay tres
opciones diagnósticas específicas:
Obtenga acceso intravenoso. La vena de pri- • Fibrilación Ventricular.
mera elección es la antecubital; iniciar el ma- • Taquicardia Ventricular (En este caso sin
nejo con suero fisiológico o solución salina nor- pulso).
mal. Prepararse para administrar medicamen- • Asistolia.
tos de acuerdo con la situación; cuando utilice
para ello la vena, administre luego un bolo de Un cuarto ritmo de colapso en el que puede
20 cc de solución salina y eleve el brazo del haber complejos QRS normales en el monitor
paciente. es la Actividad Eléctrica Sin Pulso.

Para administrar medicamentos por la vía


traqueal: FIBRILACIÓN VENTRICULAR Y
• Prepare una dosis 2 a 2.5 veces la dosis TAQUICARDIA VENTRICULAR SIN PULSO
IV normal del medicamento.
• Prepare una jeringa con 10 ml de Solución La fibrilación es un ritmo que debe ser identi-
salina. ficado e intervenido de inmediato. Cada mi-
• Introduzca un catéter largo (de unos 35 cm) nuto que pasa sin desfibrilar incrementa sen-
en el tubo. siblemente los riesgos de desenlace fatal.

49
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La secuencia implica: Si después de administrar medicamentos la


• Contacto con el paciente: No Responde. fibrilación o la taquicardia ventricular sin pulso
• Pida Apoyo: Active el sistema. continúan, se debe administrar nueva descar-
• ABCD primario: ga de 360 joules cada minuto. Entre descarga
A. Respira o no respira: el paciente no y descarga, practicar RCP continuamente y
respira. cada tres minutos administrar secuencialmen-
B. Proporcione dos a cinco ventilaciones te los fármacos indicados; además de la adre-
a Presión Positiva. nalina, luego de los primeros tres minutos si
C. Determine si hay Pulso: No hay pulso. persiste la Fibrilación Ventricular o la Taqui-
Inicie RCP. cardia Ventricular sin pulso, administrar medi-
D. ¿Hay Fibrilación Ventricular al moni- camento antiarrítmico; el medicamento de
torizar? elección además de la adrenalina en la situa-
ción descrita es la Amiodarona a dosis de 300
Si se detecta Fibrilación Ventricular o Taquicar- mg IV en bolo inicialmente.
dia Ventricular sin pulso, proceda a desfibrila-
ción inmediata. Si persiste la arritmia luego de unos minutos,
se puede administrar una segunda dosis de
Aplique una secuencia de descargas de 200 - 150 mg IV. La dosis máxima acumulada en
300 y 360 joules dejando espacio entre una y 24 horas debe ser de 2.2 g.
otra apenas para corroborar en la pantalla del
monitor si revierte el ritmo. Si solamente se dispone de lidocaína, la dosis
es de 1 a 1.5 mg por kilogramo de peso, cada
Luego de la tercera descarga (360 joules) ve- tres a cinco minutos con máximo de tres dosis.
rifique si hay pulso. Si no hay pulso proceda a
RCP durante un minuto. Si hay pulso, proce-
da a detectar el valor de la Tensión Arterial. Actividad eléctrica sin pulso (AESP)
Proceda al ABCD secundario: La presencia de alguna actividad eléctrica di-
A: Intube. ferente de la Fibrilación Ventricular o de la Ta-
B: Verifique buena intubación. quicardia Ventricular en ausencia de pulso,
C: Canalice una vena, monitorice, administre identifica esta arritmia.
medicamentos.
D: Establezca diagnóstico diferencial. Este ritmo se considera “de supervivencia”,
ya que detectando la causa con rapidez hay
Cuando no hay respuesta, proceda además a mayor posibilidad de respuesta favorable.
intubar su paciente si aun no lo ha hecho. Veri-
fique la buena posición del tubo. Canalice una Las ondas pueden ser lentas y amplias o rápi-
vena e inicie la administración de medicamentos. das y estrechas. Se observa mejor pronóstico
en los casos con complejos QRS estrechos y
El medicamento de elección inicial es la adre- rápidos.
nalina a dosis de 1 mg vía venosa. El intervalo
entre dosis de adrenalina será de tres a cinco Se recomienda la siguiente secuencia:
minutos. No existe limite para las dosis, se • Contacto: La víctima no responde. Active
puede aplicar un miligramo intravenoso cada el sistema de emergencia.
tres minutos hasta que revierta el paro. • Aplique el ABCD Primario:

50
CAPÍTULO III: REANIMACIÓN PREHOSPITALARIA

A: No Respira. Proceda a tratar de acuerdo con la causa:


B: Proporcione dos a cinco ventilaciones • Hipovolemia: Recupere la volemia agresi-
con presión positiva. vamente, en camino al hospital, no demo-
C: Verifique si hay Pulso: No hay Pulso. re el traslado por esta causa.
Inicie RCP. • Hipotermia: Recupere la temperatura
D: ¿Hay fibrilación?: no. normal.
• Proceda al ABCD secundario • Hipoxia: detecte y maneje el origen del pro-
A: Intube. blema, mejore oxigenación y asegure con
B: Verifique buena intubación. eficiencia la vía aérea.
C: Canalice vena, monitorice: detecta acti- • Hidrogeniones: Acidosis, considere bicar-
vidad eléctrica en ausencia de pulso que bonato.
no es FV ni TV. Administre Adrenalina 1 • Hiperpotasemia: considere bicarbonato.
mg IV. Administre una carga de 250 cc • Tensión en Neumotórax: Descomprima el
de sol salina. Continúe RCP. Si la acti- tórax por punción en el segundo espacio
vidad eléctrica es lenta administre ade- intercostal y línea medio-clavicular. No in-
más Atropina 0.5 a 1 mg IV. tente compresiones torácicas en camino al
D: Diagnóstico diferencial: Tan pronto de- hospital mientras no descomprima el
tecte la situación inicie proceso para de- neumotórax.
terminar la causa. • Taponamiento Cardiaco: ¿Pericardiocen-
• Determine si hubo o no trauma. Si hubo tesis? No intente compresiones torácicas.
trauma proceda de acuerdo con el ABCDE • Tóxicos: Trate de acuerdo con el tóxico.
del Trauma, detecte y maneje lesiones que ¿Intoxicación con antidepresivos tricícli-
amenazan la vida. cos? Considere bicarbonato.
• Si no hubo trauma determine la edad pues • Tromboembolismo pulmonar: Traslado in-
cada una tiene mas probabilidades de cier- mediato al hospital.
tos diagnósticos: un paciente de 17 años, • Trombosis coronaria: Traslado rápido al
por ejemplo, tendrá menos opciones de in- hospital.
farto que uno de 65 años.
• Desnude el paciente para detectar hallaz- En todos los casos es fundamental el trasla-
gos que sugieran la causa (Edema en MM do al hospital, sin demora; los pasos de reani-
II sugiere problemas renales y trastorno de mación se realizan durante el recorrido.
hipo o hiperpotasemia. Cicatrices recientes
sugieren cirugía, reposo prolongado y em- Las recomendaciones 2000 frente al bicarbo-
bolismo pulmonar. Punciones en los brazos nato sugieren:
sugieren farmacodependencia y tóxicos).
• Interrogue a parientes, analice la historia Clase I (Avalado por evidencia definitiva): En ca-
clínica; de acuerdo con los hallazgos sos de Hiperpotasemia conocida preexistente.
busque la causa con base en la nemotecnia
de “las 5H y las 5T”. Clase IIa (Aceptable, buena evidencia): Si hay
• Hipovolemia, Hipoxia, Hipotermia, Hidroge- acidosis conocida preexistente. En sobredosis
niones (Acidosis), Hipo o Hiperpotasemia. de antidepresivos triciclicos. En sobredosis de
• Taponamiento Cardiaco. Tensión en Neu- ácido salicílico.
motórax. Tabletas o tóxicos. Trombo embo-
lismo Pulmonar. Trombosis Coronaria (In- Clase IIb. (Solo evidencia Regular): Pacientes
farto del miocardio). intubados y ventilados con periodos de paro

51
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

prolongados. Al restablecer la circulación, lue- LECTURAS RECOMENDADAS


go de paro prolongado.
1. American Heart Association. Guidelines for cardio-
pulmonary resuscitation emergency cardiac care.
Clase III (Puede ser nocivo): Acidosis
JAMA 1992; 268: 2212–2302.
hipercápnica. 2. Atherton GL, Johnson JC. Ability of paramedics to
use the combitube in prehospital cardiac arrest.
Ann Emerg Med 1993; 22:1263-1268.
Asistolia 3. Baskett PJF. The Use of the laryngeal mask airway
by nurses during cardiopulmonary resuscitation: Re-
Para algunos autores la Asistolia no es una sults of multicentre trial. Anaesthesia 1994; 49:3-7.
arritmia sino la manifestación sombría de un 4. Bayes de Luna A, Coumel P, Leclercq JF. Ambula-
tory sudden cardiac death: mechanism of produc-
corazón agonizante: los pacientes que mues-
tion of fatal arrytmia on the basis of data from 157
tran asistolia en el monitor tienen tasa de su- cases. Am Heart J 1989; 117:151-159.
pervivencia muy baja, solamente de 1 a 2 %. 5. Brenner BE, Ku\auffman J. Reluctance of internists
La única esperanza de reanimación es la de- and medical nurses to perform mouth-to-mouth
tección inmediata o pronta de una causa re- resuscitation. Arch Int Med 1993; 153:1763-1769.
versible. 6. Cummins RO, Ornato JP, Thies WH, Pepe PE.
Improving survival from sudden cardiac arrest: the
Se aplica la secuencia, incluyendo ABCD pri- “chain of survival” concept: a statement for health
professionals from the Advanced Cardiac Life
mario y secundario: tras canalizar vena, moni-
Support SubCommittee and the Emergency
torice y administre medicamentos. Si en el mo- cardiac Arrest Commitee, American Heart
nitor aparece asistolia, corrobore que en rea- Association. Circulation 1991; 83:1832-1847.
lidad no hay pulso; verifique que los cables 7. Cummins RO, Hazinski MF. Cardiopulmonary
de los electrodos no se han soltado, cambie resuscitation techniques and instruction: when
de derivación en el monitor para comprobar does evidence justify revision? Ann Emerg Med
que no se trata del reflejo de fibrilación ventri- 1999; 34:780-784.
cular fina de otra derivación. Administre Adre- 8. Davies PRF, Tighe SQ, Greenslade GL. Laryngeal
mask and tracheal tube insertion by unskilled
nalina IV, 1mg cada tres a cinco minutos.
personnel. Lancet 1990; 336:977-979.
9. Frass M, Frenzer R, Rauscha F. Ventilation with
• Vea que no hay signos de muerte que con- esophageal tracheal combitube in cardiopulmo-
traindiquen la reanimación. nary resuscitation: promptness and effectiveness.
• Considere el uso de marcapasos transcutá- Chest 1988; 93:781-784.
neo precozmente. No es de uso rutinario. 10. Kern KB, Sanders AB, Raife J, et al. A study of
• Aplique Atropina 0.5 mg a 1 mg IV cada chest compression rates during cardiopulmonary
tres a cinco minutos. resuscitation in humans. Arch Intern Med 1992;
152:145-149.
11. Maier GW, Tysons GS Jr, Olsen CO, et al. The
Si al examinar cada paso determina que todo physiology of external cardiac massage: high im-
se ha ejecutado adecuadamente y persiste la pulse cardiopulmonary resuscitation. Circulation
situación, luego de veinte minutos considere 1984; 70:86-101.
suspender maniobras. 12. Mather C, O Kelly S. The palpation of pulses.
Anaesthesia 1996; 51:189-191.
13. Noe M, Weil MH,, Tang W, Turner T, Fukui M.
Mechanical ventilation may not be essential for
initial cardiopulmonary resuscitation. Chest 1995;
108: 821-827.

52
CAPÍTULO III: REANIMACIÓN PREHOSPITALARIA

14. Petito SO, Russel WJ. The prevention of gastric 17. Tang W, Weil MH, Sun SJ, Kette D, et al.
inflation: a neglected benefit of cricoid pressure. Cardiopulmonary resuscitation by precordial
Anaesth Intens Care 1998; 16:139-143. compression but without mechanichal ventilation.
15. Reinhart DJ. Laryngeal mask airway (LMA) vs Am J Resp Crit Care Med 1994; 150:1709-1713.
endotracheal tube by paramedics and respiratory 18. Staundinger T, Brugger S, Watschinger B.
therapists. Ann Emerg Med 1994; 24:260-63. Emergency intubation with the combitube:
16. Sanders AB, Kern KB, Fonken S, Otto CW, Ewy comparison with the endotracheal tube. Ann Emerg
GA. The role of bicarbonate and fluid loading in Med 1993; 22:1573-1575.
improving resuscitation from prolongued cardiac 19. Wencel V, Idris AH, Banner MJ, et al. The com-
arrest with rapid manual chest compression CPR. position of gas given by mouth-to-mouth ventilation
Ann Emerg Med 1990; 19:1-7. during CPR. Chest 1994; 106:1806-1810.

53
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IV

Transporte de pacientes politraumatizados

Andrés M. Rubiano, MD
Secretario General Asociación Colombiana de Atención Prehospitalaria,
Instructor Prehospitalario, Fundación S.I.R.E.M Bogotá
Instructor Programas PHTLS (Prehospital Trauma Life Support),
AMLS (Advanced Medical Life Support) Asociación Americana de Técnicos
en Emergencias Médicas (NAEMT) y Prehospital Brain Trauma Guidelines
(Brain Trauma Foundation New York – FUNDCOMA Cali).

INTRODUCCIÓN

E l contenido de la guía se basa en la legis-


lación actual que rige la atención prehos-
pitalaria y el transporte de pacientes en
• Transporte primario: es el traslado que se
realiza desde el sitio de ocurrencia del
evento hasta el centro de atención más cer-
Colombia: cano con la infraestructura apropiada para
realizar la atención de acuerdo al nivel de
• Decreto 1761 de 1990 (Reglamentación de complejidad.
los servicios de urgencias). • Transporte secundario o de referencia y
• Decreto 2759 de 1991 (Organización y es- contrareferencia: es el traslado que se rea-
tablecimiento del régimen de referencia y liza desde un centro asistencial hasta otro
contrareferencia). centro u otro sitio, con el fin de complemen-
• Resolución 9279 de 1993 (Manual de nor- tar el proceso de atención definitiva.
mas de traslado para la red de urgencias). • Ambulancia básica: unidad móvil destina-
• Resolución 1439 del 2002 (Manual de es- da al traslado del paciente cuyo estado real
tándares y procedimientos y condiciones o potencial no precisan cuidado asistencial
tecnológicas y científicas de servicios de especial durante el transporte.
salud). • Ambulancia medicalizada: unidad móvil
• Decreto 2309 del 2002 (Sistema obligato- destinada al traslado del paciente cuyo es-
rio de garantía de calidad de la atención tado de salud es de alto riesgo y requiere
en salud). equipo, material y personal especializado
durante el transporte.
• Ambulancia aérea: aeronave de ala fija o
INDICACIONES rotatoria tripulada por médico capacita-
do en medicina de aviación y aerotrans-
Para entender las indicaciones de transporte porte.
del paciente politraumatizado, es pertinente
conocer inicialmente algunos conceptos bá- Las razones más frecuentes de transporte en
sicos de la legislación actual: trauma son:

54
CAPÍTULO IV: TRANSPORTE DE PACIENTES POLITRAUMATIZADOS

1. Transporte primario al centro asistencial compromiso de la esfera mental, de igual for-


más apropiado. ma en la medicalizada ó por decisión exclusi-
2. Transporte secundario o de referencia y va del médico con previa consignación en la
contrarefencia de un centro asistencial a historia prehospitalaria de atención.
otro de mayor complejidad.
3. Transporte secundario o de referencia a En situaciones de emergencia y desastre la
centro de apoyo diagnóstico para evalua- prioridad de traslado debe asignarse de acuer-
ción y/o seguimiento. do con lo estipulado por el grupo de triage:
4. Transporte secundario o de referencia a Prioridad I (Rojos), Prioridad II (Amarillos),
centro de menor complejidad para segui- Prioridad III (Negros) y Prioridad IV (Verdes).
miento.
5. Transporte secundario o de referencia a Prioridad tipo I ó ROJA: Se aplica a los lesio-
centro de rehabilitación u hogar del nados críticos recuperables, quienes requie-
paciente. ren una atención médica urgente, puesto que
por la gravedad de las lesiones pueden per-
El transporte primario puede presentar mayo- der la vida y con los recursos disponibles tie-
res dificultades y tiene más posibilidad de com- nen probabilidad de sobrevivir.
plicaciones porque durante el mismo debe
realizarse el proceso inicial de estabilización Prioridad tipo II ó AMARILLA: Se aplica a los
del paciente. En el transporte secundario ó de lesionados críticos diferibles, quienes requie-
referencia generalmente el paciente ya ha sido ren una atención médica que da lugar a
estabilizado a nivel intrahospitalario, pero pue- espera.
de existir siempre la posibilidad de una com-
plicación durante éste. Prioridad tipo III ó NEGRA: Se aplica a los le-
sionados críticos no recuperables, es decir, a
Los protocolos internacionales prehospitalarios aquellos cuyas lesiones son de tal gravedad,
estandarizados dentro de las dos grandes ten- que existen pocas o ninguna probabilidad de
dencias mundiales, EMS (USA) y SAMU (Pa- sobrevivir, pero que merecen algún grado de
rís) establecen un margen de 10-15 minutos atención médica.
en la escena, donde debe evaluarse la seguri-
dad de la situación para poder acceder al pa- Prioridad tipo IV ó VERDE: Se reserva para
ciente sin riesgo para el equipo de interven- aquellos lesionados no críticos, o sea los que
ción. Este tiempo sólo puede ser sobrepasado presentan lesiones leves o que su atención
en casos extremos de seguridad del área don- puede dejarse para el final sin que por ello se
de el equipo debe permanecer inactivo hasta vea comprometida su vida.
que se dé la orden de ingreso por personal
autorizado ó en el caso de pacientes atrapa- Las indicaciones de transporte aeromédico
dos que requieran estabilización en la escena dependen de la disponibilidad de equipos ade-
hasta su proceso de extracción final. cuados. En caso de contar con ellos, distan-
cias entre 50 y 300 Km pueden ser cubiertas
En esencia todo paciente politraumatizado por equipos de ala rotatoria (helicópteros).
debe ser transportado para una completa eva- Distancias mayores de 300-400 km deben ser
luación intrahospitalaria. La ambulancia bási- cubiertas por aeronaves de ala fija (aviones).
ca sólo dejará de transportar pacientes en Estas distancias han sido establecidas a tra-
caso de negación firmada por el paciente sin vés de estudios realizados en grupos espe-

55
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cializados de transporte del Sistema Médico El Colegio Americano de Médicos de Emer-


de Emergencias (EMS) de Norteamérica y gencias (ACEP) y el Colegio Americano de
recomendados para utilización en diferentes Cirujanos (ACS) han publicado recomenda-
equipos de transporte aeromédico de acuer- ciones acerca del equipo ideal de transporte
do al rendimiento de combustible de las di- de pacientes para unidades de soporte bási-
versas aeronaves utilizadas. En el trauma, las co y avanzado que incluyen listas de chequeo
indicaciones de aerotransporte dependen de de equipos de valoración, monitorización e
la gravedad de las lesiones, buscando siem- intervención médica.
pre optimizar los tiempos de traslado. En nues-
tro país la mayor experiencia en este campo La resolución del Ministerio de Salud hoy Mi-
la tiene el grupo de medicina de aviación de nisterio de la Protección Social para nuestro
la Aeronáutica Civil, los grupos de las Fuer- país, incluye los siguientes:
zas Armadas y de la Policía, debido a que la
mayoría de las víctimas de trauma en comba- • Ambulancia de traslado asistencial bá-
te son transportadas por medio aéreo rotatorio. sico: camilla principal con sistema de an-
claje, camilla secundaria, camillas de trau-
ma así: tabla espinal corta, tabla espinal
RECURSOS larga, camilla tipo cuchara (scoop stret-
cher), Miller, o camilla de vacío. Silla de
Para realizar un transporte adecuado es ne- ruedas, sistema de oxígeno con capacidad
cesario tener el entrenamiento y el equipo total de almacenamiento de seis metros
apropiados. El personal que tripula ambulan- cúbicos. Equipo de radiocomunicaciones,
cias terrestres y aéreas debe cumplir unos sistema sonoro de alerta vial adicional al
requisitos mínimos mencionados en la ley y pito o bocina. Rutinas permanentes de
establecidos en la Resolución 1439: Manua- mantenimiento preventivo y correctivo de
les de estándares y procedimientos, condicio- los equipos médicos y de la ambulancia.
nes técnico científicas de prestadores de ser- • Ambulancia de traslado asistencial
vicios en salud. Ministerio de Salud COL, medicalizado: lo exigido para las ambu-
2002; (Anexos) 1-30. lancias de traslado asistencial básico y ade-
más los siguientes equipos: laringoscopio
• Auxiliar de enfermería como mínimo. adulto y pediátrico con hojas rectas y cur-
• Técnico o tecnólogo en atención prehospi- vas, respirador o ventilador de transporte,
talaria de una institución educativa certifi- volumen, presión, o mixto con dos circui-
cada y aprobada por el ICFES. tos respiratorios estériles, monitor de elec-
• Médico general con capacitación mínima trocardiografía con desfibrilador portátil,
de 80 horas en atención prehospitalaria en oxímetro, sistema electrónico de control de
una institución educativa aprobada y reco- infusión y glucómetro.
nocida por la Asociación Colombiana de • Ambulancia de traslado neonatal: adi-
Atención Prehospitalaria. cionalmente, cámara de Hood neonatal e
• Médico general con entrenamiento en me- incubadora portátil.
dicina de aviación o aerotransporte en una • Ambulancia aérea: se aplican las condicio-
institución aprobada y reconocida a nivel nes de traslado medicalizado. Se garanti-
nacional que cumpla con las normas esta- za que los equipos médicos utilizados so-
blecidas por la Asociación Americana de portan las condiciones del medio aeronáu-
Medicina Aeroespacial. tico como vibraciones, cambios de presión

56
CAPÍTULO IV: TRANSPORTE DE PACIENTES POLITRAUMATIZADOS

atmosférica y humedad medio ambiental. • Uso de dispositivos de bioseguridad (guan-


Los equipos médicos no deben interferir tes, mascarilla y lentes protectores).
con los equipos de radio y de navegación • Valoración inicial del paciente (secuencia
de la aeronave. ABCDE):
- Control manual de columna cervical.
Los requerimientos técnicos de los equipos - Despeje de vía aérea.
de transporte en cuanto a la infraestructura - Soporte ventilatorio.
del vehículo, sus características externas, di- - Control de hemorragias y valoración del
mensiones, iluminación y otras, pueden ser estado de shock.
consultados en la resolución 9279 del 17 de - Valoración neurológica (AVDI – Glasgow
noviembre de 1993 del Ministerio de Salud hoy – nivel sensitivo/motor).
Ministerio de la Protección Social. - Revisión completa y exposición.
• Embalaje (protección de hipotermia e in-
movilización definitiva).
CONSIDERACIONES GENERALES • Transporte
- Los pacientes en estado crítico (Glas-
Las ambulancias terrestres en cualquiera de gow <13, SaO2 < 90, PA sist <90 mmHg)
sus niveles de complejidad de atención son deben quedar bajo monitorización con-
consideradas vehículos de emergencia y se tinua de frecuencia cardiaca y respira-
rigen por el Código Nacional de Tránsito y los toria, tensión arterial y saturación arterial
artículos que los protegen, les brindan priori- de oxígeno. Los valores deben anotar-
dad y cuidado especial por parte de la ciuda- se cada cinco minutos en el registro, in-
danía. cluyendo el tamaño y la reactividad pupi-
lar. Los pacientes con valores normales
El transporte de pacientes a bordo de ambu- deben ser monitorizados continuamen-
lancias es un acto médico, que implica todas te y en caso de transportes prolonga-
las condiciones legales, humanas y éticas dos el registro se realizará cada 15 mi-
correspondientes. En el caso de los transpor- nutos (Recomendación Grado B).
tes realizados por personal nó médico, como - En pacientes politraumatizados se re-
auxiliares, tecnólogos o personal de enfer- comiendan valores de oximetría por
mería, éstos siempre deben tener una super- encima de 95%. En caso de no lograr-
visión directa a través de un sistema de co- los se debe aumentar la fracción inspi-
municaciones y en este caso la responsabili- rada de oxígeno.
dad del transporte y de los procedimientos allí - La frecuencia respiratoria debe mante-
realizados corre a cargo del médico super- nerse entre 12 y 20 respiraciones por
visor. minuto (RPM) en mayores de 1 año; y
entre 20 y 30 RPM en menores de un
año. Siempre debe existir suplemento
PROCESO DE TRANSPORTE PRIMARIO de oxígeno con máscara facial con un
valor mínimo de flujo de 10 L por minuto.
En el transporte primario los equipos básicos La decisión de manejo invasor para ven-
y médicos deben cumplir la misma secuencia: tilación mecánica (tubo endotraqueal,
Combitubo o máscara laríngea) debe
• Evaluación de la escena (seguridad y si- ser tomada por personal médico. En
tuación). caso de llevarse a cabo el procedimien-

57
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

to, la ambulancia debe detenerse hasta • La revisión completa debe realizarse ideal-
que se confirme la correcta posición del mente dentro del vehículo de transporte
dispositivo por auscultación, detector para evitar hipotermia, con exposición del
esofágico o capnografía colorimétrica o dorso para realizar palpación de la colum-
de medición infrarroja. na toracolumbar y descartar heridas pene-
- El soporte circulatorio para corrección trantes. Es necesario descubrir las extremi-
del estado de shock está indicado cuan- dades y la pelvis, especialmente en pacien-
do la tensión sistólica es <90 mm/Hg en tes inconcientes.
transportes cuya duración es mayor de • La inmovilización completa incluye aplica-
15 minutos. La canalización y la vía de ción de collar cervical rígido de una sola
acceso se realizan en ruta por orden pieza en material sintético, excepto en he-
médica y por personal entrenado y cer- ridas penetrantes cervicales (evita valora-
tificado. ción de signos de lesión vascular), coloca-
- La determinación del grado de shock se ción del paciente en férula espinal larga (ta-
hace según patrones clínicos y paraclí- bla rígida sintética ó de madera), inmoviliza-
nicos establecidos en las guías ATLS/ dores laterales de cabeza (sintéticos ó de
PHTLS del Colegio Americano de Ciru- cartón) y correas de sujeción dispuestas
janos (ACS) y de la Asociación Ameri- en cruz con 3 ó 4 puntos de anclaje (dispo-
cana de Técnicos en Urgencias Médi- sitivo tipo araña). Los espacios óseos na-
cas (NAEMT). turales deben ser rellenados con rollos (ro-
- La evaluación neurológica puede reali- dillas y tobillos). En pacientes adultos se
zarse desde el primer contacto con el debe colocar una almohadilla de espuma
paciente a través del método AVDI: sintética bajo la cabeza para lograr una
adecuada alineación. La almohadilla se
coloca en los niños a nivel del dorso (re-
gión interescapular).

PROCESO DE TRANSPORTE SECUNDARIO O


DE REFERENCIA

El proceso de transporte secundario no inclu-


ye la valoración de la escena, debido a que
se parte de un ambiente totalmente controla-
do (intrahospitalario) hacia otro programado
y notificado. Las características de monitoriza-
ción del paciente traumatizado son exacta-
mente las mismas del transporte primario, pero
se debe tener en cuenta la vigilancia de las
infusiones de medicamentos (pacientes con
goteos de sedación o inotropía, por ejemplo).

Figura 1. Algoritmo AVDI para valoración neurológica inicial.

58
CAPÍTULO IV: TRANSPORTE DE PACIENTES POLITRAUMATIZADOS

TRANSPORTE AÉREO RESTRICCIONES

Ver guía de Transporte aéreo en esta misma • El uso de CLAVE UNO está condicionado
serie. al criterio de la tripulación en los casos en
que se considere riesgoso para el pacien-
te el uso de sistemas sonoros de alerta (si-
TRANSPORTE TERRESTRE tuaciones patológicas cardiovasculares,
toxemia gravídica, síndromes convulsivos,
NORMAS PARA MANEJO DE SISTEMAS estados de alteración siquiátrica aguda,
VISUALES Y SONOROS DE ALERTA EN LAS entre otros).
AMBULANCIAS TERRESTRES • El uso de CLAVE UNO será el mínimo po-
sible dentro de las zonas residenciales ur-
Se denomina tránsito en CLAVE UNO (1) o banas, vías secundarias y zonas de circu-
CLAVE A, el desplazamiento utilizando simul- lación restringida.
tánea y permanentemente los sistemas visua- • Al acercarse a IPS hospitalarias situadas
les y sonoros de alerta. Esta clave debe ser dentro de áreas urbanas densamente po-
utilizada en el caso de pacientes críticos con bladas se debe silenciar el sistema sonoro
inestabilidad hemodinámica, dificultad respira- de alerta por lo menos 200m antes de la
toria o alteración neurológica que no han me- planta física.
jorado con el manejo instaurado. Tiene como • En casos de traslado primario, los sistemas
objeto solicitar a los conductores circundan- de alerta sonora se silencian al menos
tes la mayor prioridad para circular por las vías 100m antes de llegar a la entrada del ser-
y permite sobrepasar a otros vehículos, sin vicio de urgencias, con excepción de situa-
exceder el límite de velocidad estipulado en ciones de triage I que requieran recepción
el código nacional de tránsito. El uso de CLA- inmediata y alistamiento de equipos de
VE UNO requiere la autorización de la central trauma o paro cardiorrespiratorio.
o base de despacho de las ambulancias.

Se denomina tránsito en CLAVE DOS (2) o NORMAS MÍNIMAS


CLAVE B, el desplazamiento utilizando el sis-
tema visual de alerta. Esta clave debe utilizar- • En todos los casos de desplazamiento de
se en el caso de pacientes politraumatizados ambulancias terrestres, el conductor debe
estables hemodinámicamente, sin dificultad observar las normas del Código Nacional
respiratoria ni alteración del Glasgow. Tiene de Tránsito vigente y en especial las que
por objeto proteger la ambulancia en medio se refieren a la seguridad para los ocupan-
del flujo vehicular circundante y realizar una tes, vehículos circundantes, vías especia-
movilización lo más suave posible. les (Ej: Transmilenio) y peatones. En los
casos de utilización de CLAVE UNO la pru-
Se denomina tránsito normal o SIN CLAVE el dencia debe ser la característica de la con-
desplazamiento sin utilización de sistemas vi- ducción.
suales ni sonoros de alerta y debe ser em- • Durante cualquier desplazamiento, el con-
pleado cuando la móvil transite luego de ter- ductor de la ambulancia es el responsable
minar un servicio sin paciente a bordo. de la utilización del cinturón de seguridad
para sí mismo y para la persona que se
sitúe en la silla delantera derecha. Se re-

59
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

comienda la utilización de los cinturones TRANSPORTE PRIMARIO


de seguridad del cubículo del paciente para
acompañante y tripulante. Escena (seguridad y situación): se deben
• Todo desplazamiento de pacientes en am- seguir los protocolos establecidos abstenién-
bulancia terrestre se realiza mínimo con un dose de ingresar hasta que una entidad de
tripulante que cumpla con las especificacio- socorro con los recursos adecuados para ase-
nes anteriormente mencionadas. gurar la escena ingrese al área. Ejemplos cla-
• En cualquier tipo de traslado en ambulan- ros son los casos de estructuras colapsadas,
cia terrestre, cuando se tenga paciente a atentados terroristas e incidentes vehiculares,
bordo, el tripulante permanecerá con el pa- entre otros. La Asociación Colombiana de APH
ciente, en el cubículo dedicado a la aten- actualmente desarrolla guías de intervención
ción del mismo. para cada una de estos escenarios.
• El tripulante mantendrá al paciente con los
cinturones de seguridad de la camilla (la Vía aérea: la imposibilidad de mantener una
norma exige tres) desde el abordaje y du- vía aérea permeable no debe ser un proble-
rante todo el tiempo del desplazamiento a ma para las tripulaciones básicas o avanza-
excepción de orden médica escrita en la das. Los protocolos de uso de los diferentes
historia clínica, que sugiera diferente ma- dispositivos deben estar claros y el nivel de
nejo de seguridad. capacitación debe ser suficiente. La posibili-
• Durante el desplazamiento se podrá trans- dad de realizar accesos percutáneos con agu-
portar en calidad de acompañante, como ja (cricotiroidotomía) siempre debe contem-
máximo a una persona. Se sugiere que plarse, pero su realización sólo puede ser lle-
vaya en el asiento delantero derecho para vada a cabo por personal entrenado, certifi-
facilitar la labor del tripulante y evitar la in- cado y autorizado. En caso de pacientes con
terferencia con los procesos de estabiliza- vómito activo, el giro en bloque completo del
ción o mantenimiento del paciente. paciente sobre la tabla inmovilizadora permi-
• Las ambulancias terrestres están capaci- tirá despejar la vía aérea.
tadas para transportar dos pacientes si-
multáneamente. En situaciones muy espe- Circulación: el shock es una de las compli-
ciales, (desastres o situaciones de altera- caciones más frecuentes durante el transpor-
ción del orden público) con autorización de te. El control de la hemorragia debe tener un
la central de despacho o de la Red de Ur- orden ascendente en la siguiente forma:
gencias, se podrán transportar tres o más • Control por presión directa en el área.
pacientes por viaje. • Control por compresión próximal al sitio de
lesión (pliegues en extremidades).
• Control por torniquete.
COMPLICACIONES Y SU MANEJO
Cuando se use el torniquete debe realizarse
Muchas son las complicaciones que pueden evaluación periódica de los pulsos distales y
presentarse durante un traslado primario o se- de la coloración de la piel para evitar isquemia.
cundario. La posibilidad de solucionarlas de-
pende del grado de entrenamiento y de la dis- La cantidad de volumen a infundir depende
ponibilidad del equipo mínimo recomendado. del protocolo de cada equipo, pero actualmen-
te hay una fuerte tendencia al uso de volúme-
nes pequeños en la fase prehospitalaria, con

60
CAPÍTULO IV: TRANSPORTE DE PACIENTES POLITRAUMATIZADOS

infusiones menores de 500 mL, siguiendo el 4. Chesnut R, Marshall L et al. The role of secondary
modelo de hipotensión permisiva para evitar brain injury in determining outcome from severe
sangrados incontrolables. En el caso de pa- head injury. J Trauma 1993; 34: 216-222.
5. Consenso Multireuniones Grupo de Expertos:
cientes con trauma craneoencefálico el uso
Manejo básico de desplazamiento de ambulan-
de soluciones hipertónicas al 3% y al 7,5% es cias. Ministerio de Salud de Colombia. Bogotá,
de elección si se presenta shock descompen- 1996; pp 1-4.
sado. 6. De Lorenzo RA. A review of spinal immobilization
techniques. J Emerg Med 1996; 14:603-613.
Déficit neurológico: las complicaciones en 7. Decreto 2309: Sistema obligatorio de garantía de
este aspecto se presentan generalmente por la calidad en salud. Ministerio de Salud Nacional
inexperiencia en la evaluación clínica, la cual Col 2002; (Oct 15): 1-10.
8. Domeier RM, Ewans RW, Swor RA, et al.
debe incluir puntaje en la escala de Glasgow,
Prehospital clinical findings associated with spinal
estado de las pupilas y examen de sensibili- injury. Prehosp Emerg Care 1997; 1:11-15.
dad y fuerza. Se recomienda realizar estímu- 9. Ekcstein M, Chan L. Effect of prehospital advanced
los a nivel del arco superciliar (presión) para life support on outcomes of major trauma patients.
evaluar sensibilidad en pacientes con posible J Trauma 2000; 48: 643-648.
lesión medular cervical. 10. Liberman M, Mulder D, Sampalis J. Advanced or
basic life support for trauma: Meta-analysis and
Revisión y exposición: la hipotermia duran- critical review of the literature. J Trauma 2000; 49:
584-598.
te la exposición es una complicación frecuen-
11. López J. Triage. Clasificación y atención de multi-
te en climas fríos. Puede evitarse con cubier- tud de lesionados. Diplomado de Emergencias y
tas térmicas y la aplicación de métodos de re- Desastres, Texto Guía. Universidad CES. Mede-
calentamiento activo externo. llín, 2000.
12. Perdomo M, Rubiano A, Tovar L, Martínez C, Rin-
cón A, Cuellar H. Guías para manejo prehospita-
TRANSPORTE SECUNDARIO lario del Trauma Raquimedular. Guías Naciona-
les de Atención Prehospitalaria. Asociación Colom-
biana de Atención Prehospitalaria, 2002. (En im-
La mayoría de las complicaciones durante
presión) 1-32.
este tipo de transporte se asocian con altera- 13. Resolución 1439: Manuales de estándares y pro-
ciones propias de la patología que afecta al cedimientos, condiciones técnico científicas de
paciente. prestadores de servicios en salud. Ministerio de
Salud nacional COL, 2002; (Anexos) 1-30.
14. Resolución 9279: Normatización de traslado para
LECTURAS RECOMENDADAS la red nacional de urgencias. Ministerio de Salud
Nacional COL, 1993; (Nov 17): 1-45.
1. American College of surgeons, Committee on 15. Roush W, Fontanarosa P. EMS and prehospital
Trauma: Advanced Trauma Life Support Program care. Em Med Clin North Am 1990; 8:1-167.
for Doctors: ATLS. American College of Surgeons. 16. Rubiano A, Navarrete N, Vargas F. Guías para
Chicago, 1997. manejo prehospitalario del Trauma Craneoence-
2. Banit DM, Grau G, Fisher JR. Evaluation of the fálico. Guías Nacionales de Atención Prehospita-
acute cervical spine: a management algorithm. J laria. Asociación Colombiana de Atención Prehos-
Trauma 2000; 9:450-456. pitalaria, 2002; (En impresión) 1 – 20.
3. Chan D, Goldberg R, Tascone A. The effect of 17. Winchel R, Hoyt D. Endotracheal intubation in the
spinal immobilization Ann Emerg Med 1994; 23:48- field improves survival in patients with severe head
51. injury. Arch Surgery 1997; 132: 592-597.

61
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Inmovilizaciones

Mayla Andrea Perdomo Amar, MD


Coordinadora Centro Regulador de Urgencias
Instructor Prehospitalario Fundación S.I.R.EM Neiva, Instructor Programas PHTLS
(Prehospital Trauma Life Support), AMLS (Advanced Medical Life Support) Asociación
Americana de Técnicos en Emergencias Médicas (NAEMT) y
Prehospital Brain Trauma Guidelines (Brain Trauma Foundation New York – FUNDCOMA Cali).

INDICACIONES

L a evaluación definitiva, reanimación y


cuidado de los pacientes politraumatiza-
dos no deben retardarse en la escena. El ópti-
Las indicaciones de inmovilización en los pa-
cientes traumatizados se basan en la evalua-
ción de los siguientes aspectos:
mo manejo incluye la reanimación inicial, in- • Cinemática del trauma (mecanismo de le-
movilización, extricación y el transporte tem- sión).
prano a la Institución de Salud con la capaci- • Hallazgos físicos en el paciente.
dad para diagnóstico y tratamiento adecuado • Factores asociados.
de acuerdo a la gravedad de las lesiones, apo-
yados por el sistema de referencia local.
Cinemática del Trauma
Durante el transporte del paciente, debe limi-
tarse el movimiento de la columna vertebral Ante la presencia de cualquiera de los siguien-
con el fin de preservar la función neurológica. tes mecanismos de lesión, debe realizarse
inmovilización espinal completa (Clase III evi-
La inmovilización espinal es parte integral del dencia).
manejo prehospitalario de todos los pacientes
con lesiones raquimedulares potenciales des- • Caídas de altura.
pués de un evento traumático. Se calcula que • Eyección vehicular o caída desde un
3-25% de las lesiones espinales ocurren des- vehículo en movimiento.
pués del suceso traumático, durante el trans- • Víctimas de explosiones.
porte o en el transcurso del manejo inicial, por • Clavados en agua poco profundas.
lo tanto todos los pacientes con lesiones de • Mecanismos que producen de forma súbi-
columna cervical o con lesiones potenciales ta aceleración, desaceleración, rotación
a nivel de columna cervical, deben ser trata- excesiva del cuello o torso (ej. colisiones
dos con inmovilización total de la columna vehiculares).
hasta que la lesión haya sido excluída o el • Víctimas de volcamiento o rodamiento
manejo definitivo haya sido iniciado. vehicular.

62
CAPÍTULO V: INMOVILIZACIONES

• Evidencia de trauma de alto impacto: - Déficit neurológico.


- Pacientes muertos en el mismo vehículo. - Disnea que aparece con la movilización
- Impactos de alta velocidad (mayores a del cuello.
32 Km/ hora). - Shock neurogénico.
- Deformidad del automóvil mayor de 50 - Priapismo en los hombres.
cm.
- Desplazamiento posterior del eje fron-
tal del vehículo. Factores asociados
- Intrusión del compartimiento de pasaje-
ros de 37,5 cm en el lado del pasajero o La presencia de los siguientes factores, indi-
de 50 cm en el lado opuesto. ca la realización de inmovilización espinal
• Colisión de peatón o bicicleta contra auto- completa (Clase III evidencia).
motor.
• Colisión de conductor o pasajero en • Incapacidad para comunicarse (alteraciones
motocicletas. en el lenguaje, niños menores, extranjeros).
• Evidencia de uso de drogas o tóxicos (al-
cohol, analgésicos, sedantes, estimulan-
Hallazgos físicos en el paciente tes).
• Presencia de lesiones distractoras: lesio-
Si se encuentran cualquiera de los siguientes nes que pueden disminuir la capacidad del
hallazgos al realizar la evaluación del pacien- paciente para apreciar otras lesiones.
te, está indicado realizar inmovilización espinal (Fracturas de huesos largos, lesiones vis-
completa (Clase III evidencia). cerales, lesiones por aplastamiento, que-
maduras extensas, o lesiones que alteren
• Pacientes inconscientes o con Glasgow algunas funciones corporales).
menor de 14 (estado mental alterado). • Los pacientes con trauma penetrante aso-
• Heridas penetrantes de cabeza, cuello o ciado a déficit neurológico.
tórax.
• Fracturas de clavícula o costales altas (1°
y 2°). Recursos necesarios
• Daño significativo del casco en los
motocilcistas. Las recomendaciones del Colegio Americano
• Trauma pélvico o de miembros inferiores, de Cirujanos consisten en realizar inmoviliza-
o lesiones localizadas en el área de la co- ción espinal total con la combinación de los
lumna vertebral. siguientes dispositivos:
• Trauma facial severo.
• Signos de trauma cerrado en el torso. • Férula espinal rígida larga (42cm x 186cm):
• Signos de trauma craneoencefálico son camillas rígidas de madera, polietileno,
• Presencia de cualquiera de los siguientes metal u otros materiales para el transporte
signos: de pacientes.
- Dolor en el cuello o en la espalda en • Férula espinal rígida corta.(46 cm x 81 cm):
reposo o durante la movilización. son camillas rígidas elaboradas general-
- Deformidad de la columna cervical. mente en madera u otro material, emplea-
- Defensa muscular del cuello o la das para la inmovilización del paciente o
espalda. como dispositivo de extricación.

63
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Chalecos de inmovilización y extricación: • Cintas de fijación: se utilizan para fijar el pa-


dispositivos empleados para inmovilizar al ciente a la férula espinal y para sujetar los
paciente en posición sentado para poste- dispositivos de inmovilización a la camilla.
riormente ser colocado sobre la férula es-
pinal rígida. Está formado por las siguien-
tes partes: Férulas para extremidades
- Dos o tres cintas de fijación o correas
de sujeción torácicas cada una de un Son férulas empleadas para inmovilizar las
color específico. extremidades lesionadas disminuyendo así el
- Dos cintas de fijación o asas inguinales dolor, la hemorragia y la presentación de le-
para extremidades inferiores. siones posteriores.
- Dos cintas de fijación cefálica: frontal y
del mentón. Las férulas para extremidades incluyen las
- Dos asas para el movimiento del pacien- siguientes:
te en bloque. • Férulas rígidas: se caracterizan porque su
- Una almohadilla que ocupa el espacio forma no puede cambiarse y la extremidad
entre la cabeza del paciente y el chale- afectada debe ajustarse al contorno de la
co, evitando la flexo-extensión cervical. férula. Estas incluyen las férulas de car-
• Collares cervicales blandos: son collares tón, plástico, metal, y las neumáticas.
fabricados en espuma, que no deben ser • Férulas moldeables: pueden ser moldea-
usados como dispositivos para inmoviliza- das en diversas formas para ajustarlas a
ción espinal, debido a que disminuyen el la extremidad. En este grupo se cuenta con
rango de movilización del cuello en menos férulas de vacío, almohadas, toallas, hilos
de 5%, y no cumplen con la función reque- de alambre, férulas de aluminio cubiertas
rida en los pacientes con trauma. con espuma, etc.
• Collares cervicales rígidos: los collares cer- • Férulas de tracción: diseñadas para realizar
vicales rígidos tienen como función prote- tracción mecánica lineal para ayudar a rea-
ger a la columna cervical de la compresión. linear fracturas. Se usan comúnmente en
Limitan la flexión en cerca de 90% y la ex- fracturas de fémur.
tensión, flexión lateral y la rotación en 50%.
Estos collares pueden ser de dos piezas
(pediátrico, cuello corto, adulto, extra largo), DESCRIPCIÓN DETALLADA
de una sola pieza, graduables o de talla
específica. La inmovilización espinal reduce el movimien-
• Inmovilizadores de cabeza: diseñados para to de la columna cervical, lo cual se refleja en
evitar la flexión lateral de la cabeza. Pueden la disminución de la presentación de deterio-
encontrarse de diferentes tipos como cin- ro neurológico en pacientes con lesiones espi-
tas, cartón, rollos, espumas, bloques rápi- nales cervicales inestables posteriores a even-
dos, entre otros. Las bolsas de arena, que tos traumáticos.
fueron usadas anteriormente, no deben ser
empleadas como inmovilizadores laterales TÉCNICAS DE INMOVILIZACIÓN MANUAL
de cabeza debido a que por su peso pue- PARA EL TRANSPORTE
den deslizarse durante la evacuación lo que
puede ocasionar desplazamiento lateral de Técnicas manuales: se emplean las manos
la cabeza y el cuello del paciente. para inmovilizar la cabeza, asignando un

64
CAPÍTULO V: INMOVILIZACIONES

número para cada dedo así: (1) pulgar, (2) índi- • En pacientes con lesión torácica o con com-
ce, (3) corazón o medio, (4) anular, (5) meñique. promiso de vía aérea utilizar siempre dispo-
sitivos con espacio para realizar, en caso
Se utilizan tres tipos de inmovilizaciones: necesario, procedimientos en región crico-
1. Inmovilización anterior: pulgares (1) en arco tiroidea.
zigomático y tercer dedo (3) en línea occipi- • No deben obstruir la apertura de la boca ni
tal (escama o protuberancia). impedir la ventilación adecuada.
2. Inmovilización posterior: tercer dedo (3) en • Tener en cuenta las contraindicaciones pa-
arco zigomático, pulgares (1) en línea occi- ra alinear columna cervical:
pital en el paciente sentado. En el paciente - Deformidad ósea.
en posición supino, pulgares (1) en arco zi- - Déficit neurológico (manifestación al rea-
gomático y tercer dedo (3) en línea occipital. lizar la maniobra).
3. Inmovilización lateral: pulgar (1) y tercer de- - Disnea.
do (3) en arco zigomático, pulgar (1) y se- - Dolor (manifestación al realizar la ma-
gundo dedo (2) en línea occipital en pacien- niobra).
te sentado. - Espasmo muscular.
• Los pacientes con contraindicación de ali-
En caso de existir lesiones óseas en arco zigo- neación de columna cervical deben ser
mático y/o línea occipital, se deben escoger transportados con inmovilización manual
prominencias óseas superiores para realizar hasta los servicios de urgencias.
la inmovilización (ej: reborde orbitario, región
petrosa, región supra-auricular, etc). Solo se
debe realizar tracción en pacientes sentados COLLARES RÍGIDOS DE DOS PIEZAS
o de pie, o en caso de lesión por carga axial.
No es conveniente utilizar esta maniobra en 1. Escoger la talla apropiada.
pacientes en decúbito. 2. Colocar inicialmente la porción del dorso
(Back), verificar que la porción cefálica esté
Debe existir un espacio de aproximadamente hacia arriba.
1,3-5,2 cm debajo de la cabeza del adulto en 3. Colocar posteriormente la porción frontal
decúbito supino y de los hombros a la pelvis (Front) sobre la posterior y realizar el ajus-
en el niño menor de ocho años que debe ser te de los velcros laterales verificando la ali-
ocupado ya sea por una almohada de forma neación de los bordes del collar.
regular, mantas, espuma de consistencia dura 4. Evaluar la ubicación del mentón y reajus-
o cualquier material que se ajuste a dicho re- tar hasta lograr un cierre adecuado que no
querimiento. Este espacio puede incrementar- comprometa la respiración (no deben que-
se de acuerdo a las características del tórax dar espacios entre la piel y el collar).
en el adulto (tórax en tonel) o de la cabeza en
los niños (hidrocefalia o microcefalia).
COLLARES RÍGIDOS DE UNA SOLA PIEZA
(GRADUABLES Y POR TALLAS)
APLICACIÓN DE COLLARES CERVICALES
1. Verificar la talla o graduar al tamaño ade-
La correcta aplicación de los collares debe cuado para el paciente.
realizarse de la siguiente forma: 2. Introducir la porción posterior y luego girar
• Utilizar siempre la talla adecuada. la porción mandibular cerciorándose que

65
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

el borde inferior que va sobre los hombros • Evaluar y ajustar de nuevo las cintas del
quede bien posicionado. tórax si es necesario.
3. Ajustar el velcro lateral. • Colocar la almohadilla detrás de la cabeza
4. Revisar y reajustar si es necesario, sin com- para lograr una posición neutral y posicio-
prometer la respiración. nar las partes laterales del chaleco que so-
5. En caso de que se requiera retirar el collar portan la cabeza. Asegurar las cintas cefá-
por cualquier motivo se debe continuar con licas, primero la frontal a nivel del reborde
inmovilización manual, esta última solo orbitario y luego la cinta del mentón que
puede retirarse en caso de contar con co- debe ir en la parte superior del collar
llar cervical e inmovilizadores de cabeza. cervical.
6. Con el collar instalado la inmovilización ma-
nual lateral puede realizarse sin “anclaje”,
solo con soporte lateral de la palma de la TÉCNICAS Y DESTREZAS
mano. DE INMOVILIZACIÓN
INMOVILIZACIÓN Y TRANSPORTE DE
APLICACIÓN DE CHALECOS PACIENTES EN POSICIÓN SUPINA
DE EXTRACCIÓN (APLICACIÓN DE FÉRULAS ESPINALES):

La secuencia de aplicación de los chalecos 1. El primer auxiliador debe alinear la cabeza


de extracción varía de acuerdo a los disposi- (llevarla a posición neutral ) si no hay con-
tivos empleados. Generalmente estos chale- traindicación, e inmovilizarla durante toda
cos se emplean en los procedimientos de ex- la maniobra sin abandonar su puesto.
tracción vehicular lenta. 2. El segundo y tercer auxiliador deben alinear
totalmente el cuerpo del paciente.
El procedimiento es el siguiente: 3. El segundo auxiliador revisa el cuello del
• El paciente debe ser llevado a posición paciente y aplica el collar cervical verifican-
neutral con alineación de la cabeza para do que quede bien asegurado.
después colocar el collar cervical. Se in- 4. El segundo auxiliador debe arrodillarse a
troduce el chaleco por el espacio entre la la altura del tórax y tomar al paciente por
espalda del paciente y el asiento del vehí- el hombro y la muñeca del lado contrario
culo, verificando que las cintas de sujeción de donde se encuentra ubicado. El tercer
no se enreden en la silla. auxiliador se ubica al nivel de las rodillas,
• Abrir las partes laterales del chaleco colo- toma al paciente por la cadera y por las
cándolas bajo los brazos del paciente y a piernas asegurando que permanezcan uni-
los lados del torso del mismo. La primera das y sujetándolas a nivel de los tobillos
cinta que se asegura es la del medio, luego por el pantalón o a través de una cinta. El
se asegura la inferior y posteriormente la segundo y tercer auxiliador pueden adop-
superior, de una forma adecuada pero sin tar la anterior posición cruzando entre ellos
comprometer la respiración del paciente. sus brazos si lo desean.
• Colocar y ajustar las cintas o asas de suje- 5. Para rotar al paciente los auxiliadores de-
ción inguinales pasándolas por debajo de ben hacerlo al mismo tiempo cuando el pri-
las rodillas y en movimiento de vaivén llevar- mer auxiliador lo indique, llevando al pa-
las hasta el pliegue glúteo y al lado de los ciente a una posición perpendicular del
genitales asegurándose de no lesionarlos. suelo.

66
CAPÍTULO V: INMOVILIZACIONES

6. El cuarto auxiliador debe colocar la camilla TÉCNICAS PARA LA COLOCACIÓN


a lo largo del paciente en el espacio que DE FÉRULAS EN LAS EXTREMIDADES
éste ocupaba en el suelo antes de rotarlo.
7. Los auxiliadores posteriormente deben co- El objetivo de la férulas es prevenir el movi-
locar con mucho cuidado al paciente so- miento en las puntas óseas fracturadas, lo que
bre la camilla centrándolo en ella. disminuye la incidencia de dolor, discapacidad
y complicaciones graves. También elimina el
La fijación del paciente sobre la camilla se daño a los músculos, nervios y vasos sanguí-
hace de la siguiente forma: neos. La aplicación de férulas debe emplear-
1. Colocar el soporte de los inmovilizadores se para pacientes estables. En pacientes poli-
laterales de cabeza o una almohadilla de traumatizados inestables, es mejor realizar la
forma regular bajo la cabeza del paciente inmovilización espinal completa para evitar la
si este es adulto, o debajo de los hombros pérdida de tiempo en la escena.
a la pelvis si el paciente es pediátrico.
2. Fijar el tórax a la camilla con dos cintas Al tomar la decisión de colocar una férula en
que deben ir con una disposición en “X”. una extremidad debe tenerse en cuenta:
3. Fijar la pelvis del paciente con un cinta in- • Visualizar la parte lesionada adecuada-
dependiente de las extremidades. mente. Cortar la ropa para poder visualizar
4. Fijar las extremidades inferiores con una la lesión, no halarla.
cinta proximal y una distal a las rodillas. • Revisar la sensibilidad, circulación y movi-
Debe colocarse un rollo que puede ser de miento de la extremidad antes y después
espuma, tela gruesa u otro material entre de colocar la férula.
las piernas del paciente, asegurando así • Si la extremidad está muy angulada, es
una alineación correcta de las extremida- conveniente realizar una ligera tracción que
des inferiores. no debe exceder 4,5 kilogramos de presión.
5. Los miembros superiores deben fijarse pa- Si al ejecutar este procedimiento se en-
ralelos al torso del paciente con una cinta cuentra resistencia, debe inmovilizarse la
adicional, nunca con la misma cinta que extremidad en la posición encontrada. Si
fija la pelvis. el Centro Asistencial al cual se llevará el
6. Colocar los inmovilizadores laterales de ca- paciente está cerca del sitio del impacto,
beza, que deben estar sujetos previamen- es mejor inmovilizar la extremidad en la
te a la camilla. Fijar los inmovilizadores late- posición encontrada.
rales a la cabeza del paciente con las cintas • Las heridas se cubren con apósitos estéri-
de fijación frontal para la frente del pacien- les antes de colocar la férula, y ésta se
te y la mentoniana para la porción rígida colocar lejos de las heridas abiertas para
del collar cervical que va sobre el mentón. prevenir necrosis por presión.
7. Si el paciente se encuentra en posición pro- • La férula debe inmovilizar la extremidad
na debe realizarse el mismo procedimien- una articulación por encima y por debajo
to rotándolo antes a una posición supina, de la lesión.
manteniendo la alineación total de la co- • La férula debe acolchonarse.
lumna.

67
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

GUÍA GENERAL queda de signos de alarma como alteración


DE INMOVILIZACIÓN TOTAL sensitiva, alteración motora y priapismo.
5. Si hay alteración en la valoración neuro-
Arribo al área de trabajo: realizar la valora- lógica, verificar la posibilidad de shock
ción de la seguridad de la escena (tener los neurogénico.
elementos de bioseguridad completos y ase- 6. En lesiones cervicales se debe tener en
gurar el área. No debe ingresarse antes de cuenta que puede presentarse deterioro
verificar que no existan riesgos para el perso- respiratorio.
nal prehospitalario). 7. Colocar al paciente en la férula espinal
según técnicas de inmovilización, luego co-
El primer paso es evaluar la existencia de in- locar los inmovilizadores laterales, asegu-
dicaciones de inmovilización espinal (cinemá- rar y transportar de manera rápida.
tica del trauma, hallazgos físicos del pacien- 8. En áreas inseguras, realizar inmoviliza-
te, factores asociados). Ante la existencia de ciones manuales rápidas, evacuar el pa-
indicación de inmovilización espinal, proceder ciente y aplicar protocolo en área segura.
de la siguiente forma: 9. Realizar exposición total dentro del vehí-
1. Alineación e inmovilización manual de co- culo de transporte.
lumna cervical. 10. Reevalúar el ABCD del paciente constante-
2. Realizar la valoración primaria : verificar vía mente, haciendo énfasis en la capacidad
aérea, ventilación y circulación. motora, sensorial y en la presencia de pulsos
3. Colocar el collar cervical y efectuar palpa- en las cuatro extremidades del paciente.
ción de la columna cervical. 11. Los cambios deben ser reportados al Cen-
4. Realizar la valoración neurológica de las tro Regulador de Urgencias local, para de-
cuatro extremidades del paciente, en bús- finir el destino del paciente.

68
CAPÍTULO V: INMOVILIZACIONES

ALGORITMO DE INMOVILIZACIÓN ESPINAL DEL PACIENTE CON TRAUMA

Evaluación de la escena. Seguridad del área

Indicaciones de inmovilización espinal:


- Cinemática del trauma
- Hallazgos físicos del paciente
- Factores asociados

Alineación e inmovilización manual de columna cervical

Realizar valoración primaria y tratar lesiones prioritarias

Colocar collar cervical. Palpar el cuello del paciente

Realizar valoración neurológica en búsqueda de:


- Alteraciones motoras
- Alteraciones sensitivas
- Evaluar dermatomas (nivel de lesión)
- Priapismo en hombre
- Shock neurogénico

Completar inmovilización espinal con: férula espinal larga, inmovilizadores laterales de cabeza, cintas de fijación

Iniciar transporte hacia el centro asistencial apropiado

Realizar exposición del paciente dentro del vehículo de transporte

Reevaluar A, B,C, D constantemente. Reportar cambios en el paciente al Centro Regulador de Urgencias.

69
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COMPLICACIONES Y SU MANEJO o de vacío puede incrementar el riesgo de as-


piración y limitar la función respiratoria. Para
Algunas de las complicaciones que pueden evitar efectos nocivos en los pacientes deben
presentarse en el paciente politraumatizado emplearse collares cervicales que permitan la
al realizar la inmovilización espinal total son apertura de la boca del paciente, para que en
ocasionadas por dificultades durante el trans- el caso de presentarse vómito este pueda ser
porte, por el uso de los dispositivos, y por las eliminado sin dificultad. De igual forma al fijar
lesiones ocasionadas en el paciente debido el paciente a las férulas espinales a través de
al trauma. Estas son: cintas, estas deben ser reevaluadas constan-
temente para evitar el ajuste excesivo de las
APARICIÓN DE LESIÓN NEUROLÓGICA EN mismas, y por último los dispositivos para in-
LESIONES ÓSEAS AISLADAS INICIALES movilización espinal deben emplearse para el
transporte del paciente y deben ser removidos
Más de 20% de las lesiones de columna invo- de forma temprana al descartar las lesiones.
lucran niveles vertebrales múltiples no conti-
nuos, por lo tanto la columna vertebral total es-
INSUFICIENCIA RESPIRATORIA
tá en riesgo de ser lesionada por movilizaciones
incorrectas posteriores a la lesión inicial. Se
La presencia de lesiones medulares altas (C2-
debe tener especial atención con la aparición
C5), raíces que inervan el músculo diafragma,
de shock neurogénico en pacientes con lesio-
hacen que el paciente pierda la capacidad de
nes medulares completas, que se manifiesta
respirar espontáneamente, requiriendo por lo
por la presencia de bradicardia, hipotensión por
tanto de soporte ventilatorio adecuado para
vasodilatación, piel caliente y seca. El manejo
evitar la aparición de insuficiencia respirato-
preshospitalario inicial está basado en la ad-
ria y muerte. Es necesario al encontrar pa-
ministración de líquidos de manera cuidadosa.
cientes con déficit neurológico, determinar el
nivel de lesión para proveer soporte ventila-
ÚLCERAS DE PRESIÓN
torio durante el transporte, debido a que los
pacientes con lesiones cervicales tienen una
La inmovilización espinal aumenta el riesgo de
alta incidencia de compromiso de la vía aérea
aparición de úlceras de presión en pacientes
y de disfunción respiratoria.
que permanecen en la misma posición por más
de dos horas luego de la lesión inicial, o cuan-
do el tiempo de permanencia en la férula AUMENTO DE LA PRESIÓN INTRACRANEANA
espinal rígida es prolongado. Para evitar la apa-
rición de las úlceras de presión, la inmoviliza- Los collares cervicales han sido asociados con
ción espinal total debe suspenderse tan pronto elevación de la presión intracraneana en pa-
las lesiones de columna han sido descartadas. cientes con trauma. En estos pacientes se
Los cuidados de la piel tienen gran importan- debe vigilar que la colocación del collar cervi-
cia para evitar la aparición de estas lesiones. cal no se acompañe de ajuste excesivo de los
velcros que incremente aún mas la presión
RIESGO DE ASPIRACIÓN Y LIMITACIÓN DE intracraneana. De igual forma se deben reali-
LA FUNCIÓN RESPIRATORIA zar de forma prioritaria las imágenes diagnós-
ticas necesarias para descartar lesiones cer-
La inmovilización espinal cervical con collares vicales y poder retirar estos dispositivos de
cervicales rígidos y férulas espinales rígidas forma segura.

70
CAPÍTULO V: INMOVILIZACIONES

DOLOR realizarse de forma cuidadosa en volúmenes


pequeños (500cc), con valoración de los sig-
La inmovilización espinal total puede ocasio- nos circulatorios (pulso, características de la
nar en los pacientes cefalea localizada en la piel, llenado capilar, nivel de conciencia, ten-
región occipital, dolor lumbar, sacro y mandi- sión arterial entre otros) posterior a la infusión.
bular cuando el tiempo de inmovilización es
mayor a 30 minutos. La presentación de dolor
occipital y lumbosacro es mucho mas frecuen-
LECTURAS RECOMENDADAS
te y de mayor severidad en los pacientes inmo-
vilizados en férulas espinales rígidas que en 1. Armitage JM. Respiratory problems of air travel in
las férulas de vacío. La férula de vacío es lige- patients with spinal cord injuries. BMJ.1990;
ramente mas confortable que las férulas rígi- 300:1498-1499.
das y proporciona una adecuada inmoviliza- 2. Banit DM, Grau G, Fisher JR. Evaluation of the
ción del torso del paciente, pero no se reco- acute cervical spine: a management algorithm. J
mienda para extricación porque no es lo sufi- Trauma 2000; 49:450-456.
3. Bauer D. Effect of spinal immobilization on
cientemente rígida y es mucho mas costosa
pulmonary function in the healthy, non smoking
(tres veces mas costosa) que la férula rígida man. Ann Emerg Med 1988,17:915-918.
y en la mayoría de Centros Asistenciales no 4. Boyd CR. Emergency interhospital transport of the
se cuenta con ella. major trauma patient: Air versus ground. J Trau-
ma. 1989;29:789-794.
SÍNDROME COMPARTIMENTAL 5. Camacho LA, Nightingale RW, Myers BS: Surface
friction in near vertex head and neck impact
Puede desarrollarse debido a lesiones de las increases risk of injury. J Trauma 1999; 32:293-301.
6. Chan D, Goldberg RM, Tascone A. The effect of
extremidades causadas por aplastamiento,
spinal immobilization on healthy volunteers. Ann
fracturas abiertas o cerradas y compresión Emerg Med. 1994; 23:48-51.
sostenida. El manejo prehospitalario se basa 7. Curran C. Pediatric cervical spine inmobilization:
en la temprana identificación de los síntomas Achieving neutral position. J Trauma 1995; 39:729-
y signos en las extremidades en las cuales 732.
las lesiones puedan llegar a ocasionar este 8. Frohna WJ: Emergency department evaluation
síndrome. En el caso de desarrollarse debe and treatment of the neck and cervical spine inju-
realizarse el transporte urgente al Centro Asis- ries. Emerg Med Clin North Am 1999; 17:739-791.
9. Grossman MD, Reilly PM, Gillet T, Gillet D.
tencial apropiado para su manejo.
National survey of the incidence of cervical spine
injury and approach to cervical spine clearance in
SHOCK HIPOVOLÉMICO U.S Trauma centers. J Trauma: Injury, Infection,
and Critical Care.2000;: 684-690.
La presencia desapercibida de hemorragia 10. Hadley M. Cervical spine immobilization before
activa en una extremidad, o la presencia de admission to the hospital. Neurosurgery 2002;
hemorragia interna llevarán a shock hipovolé- 50:7-16.
mico. El paciente antes de ser inmovilizado 11. Hadley M. Transportation of patients with acute
traumatic cervical spine injuries. Neurosurgery.
totalmente debe ser valorado para descartar
2002;50:18-20
la presencia de sangrado activo o la presen- 12. Hadley M. Blood pressure management after acute
cia de signos tempranos de shock. El trata- spinal cord injury. Neurosurgery 2002; 50:58-62.
miento prehospitalario está enfocado en con- 13. Kolb JC. Cervical collar- induced changes in
trolar la hemorragia con compresión directa intracranial pressure. Am J Emerg Med 1999;
de la herida. La reposición de líquidos debe 17:135-137.

71
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Extricación vehicular

Luis Eduardo Vargas Téllez, MD


Médico de Atención Prehospitalaria, Centro Regulador de Urgencias
Secretaría de Salud, Bogotá
Director Académico,
Universidad del Rosario

INTRODUCCIÓN
FASES DE LA EXTRACCIÓN
L a Atención Prehospitalaria (APH) reúne
una serie de condiciones y destrezas que
son complemento de las que se imparten en
VEHICULAR
la educación de pregrado. Son de gran impor- Todas las operaciones de rescate, incluyen-
tancia para el adecuado manejo de pacientes do la extricación vehicular, deben seguir las
en situaciones o escenarios especiales y de- cuatro fases de la secuencia LAST, que son:
ben ser de dominio del médico y del personal
de salud que se dedica a esta importante y 1. Localizar el paciente con sospecha de
creciente modalidad de atención en salud en lesión.
Colombia. 2. Acceder al paciente, confirmando la segu-
ridad en la escena.
Una de las técnicas de la APH es la extricación* 3. Estabilizar el paciente y prepararlo para el
vehicular (rescate vehicular) que consiste en transporte.
el rescate e inmovilización de víctimas que su- 4. Transportar el paciente al hospital.
fren un accidente de tránsito y que han queda-
do atrapadas en el vehículo colisionado. De-
bido al alto índice de accidentalidad de tránsi- LOCALIZACIÓN
to en nuestro país, y a la cantidad de muertes
o discapacidades por accidentes de tráfico, la La operación de rescate vehicular comienza
extricación es la maniobra de mayor frecuen- cuando el Centro Regulador de Urgencias
cia como evento de rescate en Bogotá DC. (CRU) o el Centro de Despacho de cada ciu-

* Vocablo utilizado en la atención prehospitalaria de pacientes accidentados. Se refiere a retirar la víctima del accidente cuando
permanece atrapada en el interior del vehículo colisionado. Implica la remoción de puertas y vidrios o el corte de los
metales de la estructura del automotor y, además, su estabilización para evitar mayores daños a las víctimas o al personal de
socorro. En la atención moderna del trauma la extricación es un proceso que obedece a lineamientos y protocolos bien
definidos y muy estrictos. Se ha propuesto su aceptación a la Comisión de Vocabulario Técnico de la Academia Nacional de
Medicina de Colombia.

72
CAPÍTULO VI: EXTRICACIÓN VEHICULAR

dad es alertado a través de la línea de emer- alrededor del vehículo implicado, en direccio-
gencias (125 para Colombia), Red de Apoyo, nes opuestas y a distancia prudente, recolec-
Red de Emergencias o teléfonos directos. tando información de peligros potenciales en
la escena. Esto debe hacerse rápida y siste-
El despachador (radio operador) necesita cono- máticamente.
cer la naturaleza exacta de la llamada: ¿quién
llama?, ¿de dónde llama? (número del teléfo- Es aconsejable acordonar la zona de impacto,
no), ¿qué ha sucedido?, ¿cuándo sucedió?, poner los vehículos de emergencia por fuera
¿dónde es exactamente el sitio del accidente? de esta Zona de Seguridad y comenzar las
(pedir señales y puntos de orientación), ¿cuán- maniobras tendientes a controlar los riesgos
tas personas hay involucradas, adultos o niños? inminentes y a estabilizar los vehículos acci-
dentados.
Las decisiones acerca del personal, equipo o
tipo de vehículo a enviar, incluyendo la nece- EQUIPO DE PROTECCIÓN PERSONAL EN
sidad de pedir apoyo a otras entidades, se RESCATE VEHICULAR
basa en la información recogida en la llama- • Casco con protección facial y linterna.
da y en los protocolos de despacho estableci- • Monogafas.
dos por el CRU. Es de gran importancia que • Guantes en cuero Kevlar resistentes al
se clasifique adecuadamente la llamada para corte.
el despacho del equipo y personal acorde con • Botas de seguridad, con protección o pun-
la gravedad del accidente. tera de acero.
• Uniforme de manga larga (resistente al fue-
Una vez se desplaza la ambulancia debe man- go si hay riesgo potencial), chaquetón (re-
tenerse contacto con la persona que llama sistente al fuego si hay riesgo potencial).
para darle recomendaciones de actuación o • Guantes de látex (o similar) por debajo de
precauciones, así como para ayudar a orien- los guantes de protección mecánica.
tar al vehículo(s) que va(n) en camino.

CONSIDERACIONES EN EL PARQUEO
ACCESO
No parquear la unidad muy cerca de la zona
Al llegar el equipo de APH al sitio se debe “ase- de peligro, sino a un mínimo de 50-100 m de
gurar la escena”. El primer equipo en arribar, y distancia. Si hay peligro o inminencia de fuego,
los equipos que lleguen posteriormente, deben explosión, considerar una zona segura inicial
evaluar panorámicamente la escena. La infor- de 200-300 metros. El vehículo de emergen-
mación que se obtenga debe reportarse inme- cias, ambulancias y el personal debe ser pro-
diatamente a la Central de Comunicaciones y tegido del tráfico con señales y luces de segu-
al Jefe Operativo del rescate, quien informará ridad. La salida de las ambulancias no puede
a todos los equipos que hayan sido enviados. quedar bloqueada por otros vehículos.

Tan pronto llegue la autoridad local encarga-


EVALUACIÓN DE LA ESCENA da de manejar el tráfico, se le hace entrega
de esa responsabilidad.
Reconocer el peligro. Idealmente dos resca-
tadores deben realizar una vuelta en círculo

73
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CONSIDERACIONES ESPECIALES hículo y el acolchonamiento de las llantas. Se


deben colocar bloques entre el vehículo y el
Al llegar a la escena del accidente, especial- piso. Las llantas deben desinflarse lentamen-
mente cuando se trate de situaciones inusua- te sin estallarlas (lo que ocasionaría movimien-
les (diferentes a choque vehicular simple con tos bruscos y peligrosos para el paciente).
heridos leves) o cuando se presenten acciden-
tes en autopistas con múltiples vehículos y víc-
timas, se debe tener muy presente una se- VEHÍCULOS QUE QUEDAN SOBRE SUS CUA-
cuencia de operaciones diferente: TRO RUEDAS, SOBRE UN TERRENO INES-
1. Preparación: conocimiento de los compo- TABLE O INCLINADO
nentes estructurales del vehículo (anato-
mía vehicular; sistemas de combustible, ba- El sitio hacía donde puede deslizarse el vehí-
terías, fluidos de un vehículo, bolsas de aire culo debe considerarse zona de peligro. Es
y accesorios). Conocimiento de técnicas de necesario asegurar con tablones, desinflar
corte: en estructuras tubulares, planas, lá- neumáticos y atar el vehículo con cadenas y
mina angulada, cristales, cortes con sople- cuerdas para darle estabilidad antes del ingre-
te. Técnicas de estabilización vehicular. so de los rescatadores. Los anclajes con cuer-
Equipo disponible y listo para ser usado. das o cadenas deben realizarse teniendo en
2. Respuesta: activación de los servicios de cuenta el centro de gravedad. Es necesario
rescate, acercamiento seguro a la escena fijarlos a puntos bajos que no interfieran con
y ubicación del equipo. el proceso de extricación.
3. Control de riesgos: líneas de energía, tube-
rías de gas o químicos, estructuras inesta- Debe tenerse igual precaución en las bermas
bles, verificación del sistema comando de (calzadas laterales de autopistas) que suelen
emergencias y líder del operativo. ser inclinadas con riesgo de volcar.

VEHÍCULOS QUE QUEDAN VEHÍCULO DE LADO


SOBRE SUS CUATRO RUEDAS
Cuando se encuentra un vehículo de lado,
Hay que estabilizarlos para prevenir daño adi- fácilmente puede seguir rodando. El manejo
cional sobre el paciente o los rescatadores, lo consiste en aumentar el plano de sustentación
cual se logra mediante la colocación de blo- por medio de bloques y maderos, y colocar
ques (maderos, bloques de materiales duros, “templetes” (cuerdas o cadenas) desde el cen-
ladrillos, etc.) por delante y por detrás de las tro de gravedad hacia los lados para estabi-
cuatro llantas. El rescatador que primero ingre- lizarlo, tanto en los puntos superiores como
sa al vehículo debe colocar el freno de mano inferiores para impedir el volcarse.
y apagar el switch de encendido. En vehículos
automáticos colocar la transmisión en “park”
(parqueo), en mecánicos dejar en un cambio VEHÍCULO POSTRADO SOBRE EL TECHO
de parqueo (nunca en neutro) con freno de
mano aplicado. Para estabilizar el vehículo y evitar que se
aplaste por debilitamiento de los postes o “pa-
Otro paso importante es minimizar el vaivén y rales”, se procede a identificar por lo menos
rebote ocasionado por la suspensión del ve- cuatro puntos: dos en la parte delantera

74
CAPÍTULO VI: EXTRICACIÓN VEHICULAR

(capot) y dos en la parte trasera (baúl o male- la Vida”. Existen unas que sirven como ex-
tero), bajo los cuales se pueden armar estribas pansores, otras que sólo sirven para corte y
que sirvan de puntos sólidos entre la carroce- otras que sirven para ambos procesos (expan-
ría y el suelo. sión y corte).

Es importante tener en cuenta que al forzar


GANANDO ACCESO AL PACIENTE una puerta lateral o trasera, deben primero
romperse los vidrios debido a que las fuerzas
Acceso Inicial que se requiere ejercer sobre la puerta al reti-
rarla pueden hacer que los vidrios estallen
Primero asegurarse de que el vehículo se en- lesionando el paciente o a los rescatadores.
cuentra adecuadamente estabilizado. Buscar
el acceso por el sitio más fácil (primero inten-
tar abrir puertas antes que romperlas o rom- FASE DE ESTABILIZACIÓN
per los vidrios). DEL PACIENTE (INMOVILIZACIÓN)
Para ilustrar el procedimiento, se plantea una
Acceso a través de una ventana extricación con tres rescatadores que se deno-
minan #1, #2 y #3. La víctima del accidente
Si es imposible acceder por las puertas, se de tránsito puede encontrarse en diferentes
debe acceder a través de las ventanas. Los posiciones: sentado, tendido sobre el piso del
vidrios laterales y traseros son templados, lo vehículo, tendido sobre el techo de un vehí-
que hace que al romperse se conviertan en culo volcado, etc. Para entender mejor esta
pequeños fragmentos redondos. Los parabri- práctica se revisa la extricación del paciente
sas delanteros modernos suelen ser “lamina- sentado sobre una silla y apoyado sobre el
dos”, lo que impide que se generen fragmen- espaldar o sobre el timón.
tos. Existen herramientas como el “window
push” para romper los vidrios, aunque podría Lo primero que debe sospecharse es trauma
aplicarse un destornillador con un golpe fuer- cervical, trauma de columna torácica o lum-
te y seco en una esquina del vidrio. Idealmente bar y trauma cráneoencefálico. Para la técni-
deben cubrirse con pedazos de cinta adhesiva ca de extricación se requiere un mínimo de
para impedir que los fragmentos salten y para tres rescatadores. El primer rescatador que
facilitar su extracción. En la ejecución de es- ingresa al vehículo (#1) por la parte trasera,
tos procesos el paciente siempre debe estar evalúa su estado, determina el estado de con-
cubierto con una tabla larga o algo que le im- ciencia y el del primer ABC (vía aérea, venti-
pida ser herido; por ello suele comenzarse, si lación [breathing], circulación), fija la columna
no hay acceso posible por las puertas, por los cervical sosteniéndolo por la cabeza (no por
vidrios más alejados del paciente. el cuello), para permitir que el segundo (#2)
rescatador coloque el collar cervical. Luego,
Cuando las puertas se encuentren bloquea- y manteniendo el control cervical en todo mo-
das, se dispone de herramientas adicionales mento, los rescatadores #2 y #3 colocan la
para forzar puertas y cortar “parales”. Estas tabla corta (espinal) o el chaleco de Kendrick
herramientas, que son hidráulicas y funcionan contra la espalda del paciente y entre ésta y
con aire a presión suministrado por un com- el espaldar de la silla (se debe tener precau-
presor auxiliar, se denominan “Mandíbulas de ción que las correas del chaleco no queden

75
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

enredadas u ocultas y después dificulten la FASE DE TRANSPORTE


fijación) hasta que toque la parte horizontal
de la silla y se detenga. Aunque es la fase final de la extricación vehi-
cular, no es la última responsabilidad del per-
Si el paciente está sobre el timón, se le acer- sonal de APH, que debe entregar el paciente
ca el chaleco Kendrick y luego se lleva hacia al hospital, reportar todos los pormenores del
atrás el conjunto chaleco-paciente. Una vez proceso de rescate al médico receptor en el
colocado se asegura con las correas laterales, hospital y a la Central de Radio del CRU.
que normalmente vienen en tres colores (su- Cuando se considere adecuado se traslada
perior verde, media amarilla e inferior roja) y el paciente a las camillas y tablas del hospital
las correas pélvicas (negras). Una vez en esta y se retiran los elementos de inmovilización
posición, los rescatadores #2 y #3 pasan los (labor que es responsabilidad del equipo de
bordes laterales del chaleco (aletas), por de- APH).
bajo de las axilas del paciente y fijan las co-
rreas, la superior primero (verde); luego se fi- Una vez terminada la entrega, la función del
jan las dos correas pélvicas (negras), una de equipo es readecuar la ambulancia, organizar
cada lado, y finalmente se fijan y se ajustan la y recuperar los equipos usados y realizar la
segunda y tercera correa (amarilla y verde). limpieza y desinfección necesaria para repor-
En este momento se pasan los soportes late- tar que nuevamente están en servicio y listos
rales posteriores de cabeza y con correas (vel- para otra misión.
cros o cintas) y se fija la cabeza del paciente
para estabilizarlo. Luego el rescatador más Es importante que el encargado de APH retire
cercano a la puerta del conductor (#2) se en- los elementos de inmovilización y de traslado
carga de sostener la cabeza, el #1 el tórax del paciente a la camilla del hospital, una vez
(por las correas del chaleco) y el #3 las pier- sea autorizado. Antes de salir del sitio del
nas. Con movimientos cortos y sincronizados, evento, se designa un miembro del equipo pa-
dirigidos por el reanimador (#2), se va giran- ra recoger todos los elementos usados duran-
do el paciente hasta ponerlo en posición hori- te la reanimación y extricación del paciente,
zontal sobre la silla. En este momento se debe verificando que estén en su totalidad y de
colocar la tabla espinal larga (soportada en acuerdo con las listas de inventario, y para
una pierna de un reanimador o sobre la cami- que al salir del hospital se pueda contar con
lla) por la puerta del conductor para que reci- un inventario adecuado.
ba el paciente y se pase definitivamente a la
camilla de la ambulancia. Deben tomarse las mismas precauciones de
seguridad vial cuando se dirige de la escena
Cuando ya se tiene al paciente sobre la cami- al hospital.
lla, se completan las fijaciones y ajustes de
correas, además de las medidas normales del
ABCD de la reanimación. El paciente puede EXTRACCIÓN VEHICULAR
ser retirado por cualquier puerta del carro, in- RÁPIDA
cluso por el espacio del parabrisas, vidrio tra-
sero, baúl (carros cupé), según lo decida el Los pacientes que quedan atrapados en un
equipo de APH. vehículo normalmente son retirados (extrica-
dos/extraídos) mediante una tabla corta o cha-
leco de Kendrick y luego puestos sobre una

76
CAPÍTULO VI: EXTRICACIÓN VEHICULAR

tabla larga para el transporte definitivo. No to- del ABC de la evaluación, y se hace al mismo
das las veces se cuenta con el recurso o con tiempo que comienza la evaluación de la vía
el tiempo, ya sea porque el estado crítico del aérea. La técnica consiste en:
paciente no da espera o porque los peligros 1. Colocar un collar cervical apoyándose en
en la escena tampoco lo permiten. En estos el compañero que debe estar inmovilizando
casos especiales se usa un procedimiento lla- el cuello del paciente desde atrás.
mado Extracción Vehicular Rápida que se 2. Deslizar la tabla larga sobre el asiento del
explica a continuación. paciente tratando de ubicarla en parte bajo
los glúteos.
SITUACIONES QUE REQUIEREN 3. Un segundo rescatador se coloca cerca de
EXTRACCIÓN RÁPIDA la puerta abierta del vehículo y toma el con-
trol de la columna cervical.
Cuando al evaluar la escena se demuestra 4. Un tercer rescatador se coloca al otro lado
una condición que puede poner en peligro al del paciente por la puerta opuesta, listo
equipo de atención o al paciente como: para sujetar y girar las piernas del paciente.
1. Fuego o riesgo de fuego inmediato. 5. El rescatador que está frente al paciente
2. Peligro de explosión. coloca un brazo a lo largo de la espalda
3. Nivel de agua que aumenta rápidamente. del paciente y la mano se encarga de sos-
4. Una estructura con riesgo de colapso. tener la cabeza desde el occipucio, y con
5. Exposición continua a tóxicos. el brazo delantero apoyado sobre el tórax
6. Riesgo por conflicto bélico. se encarga de sostener la cabeza adelan-
te sobre el mentón.
Cuando se detecte una condición que requie- 6. Se gira al paciente de manera que la espal-
re intervención inmediata (urgente) y que no da quede frente a la tabla. Se levantan las
puede ser atendida dentro del vehículo, como: piernas y se desciende la espalda hacia la
1. Obstrucción de la vía aérea que no puede tabla.
solucionarse con levantamiento del men- 7. Con trabajo en equipo, se desliza cuidado-
tón o barrido digital. samente al paciente sobre toda la superfi-
2. Paro cardiaco o respiratorio. cie de la tabla y se estiran con cuidado las
3. Lesiones de tórax o vía aérea que requie- piernas hasta que quede acostado total-
ran de ventilación asistida. mente en la tabla. Sólo en ese momento
4. Shock profundo o sangrado que no se pue- se pueden retirar las manos que están de-
da controlar. lante y por detrás de la espalda. Se man-
tiene la inmovilización cervical alineada.
La extracción rápida sólo se usa en situacio- 8. Luego, se mueve al paciente lejos del vehí-
nes donde la vida del paciente está en peligro culo hasta una zona considerada segura
inmediato. Siempre que se use debe anotar- para el resto del manejo y estabilización
se en el reporte escrito. (hacia la ambulancia si es posible). Se debe
sujetar el paciente a la tabla con las co-
Técnica. Un rescatador debe, si es posible, rreas tan pronto como sea posible.
situarse detrás del paciente, por la parte tra- 9. Se consignan por escrito las causas que
sera del vehículo, colocar sus manos a cada motivaron a realizar extricación de secuen-
lado de la cabeza del paciente y estabilizar el cia rápida.
cuello en posición neutral. Este paso es parte

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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PROTOCOLO DE RETIRO DE CASCO movimiento y el manejo de la maniobra siem-


A UN MOTOCICLISTA LESIONADO pre deben ser coordinados entre los dos reani-
madores. Con un movimiento suave final el #1
Cuando se encuentra una víctima de acciden- lo separa de la cabeza del paciente, mientras
te en moto debe retirarse el casco e inmovilizar el reanimador #2 soporta la base de la cabeza.
el paciente de la manera convencional, es de-
cir como se inmoviliza un paciente con trauma Una vez retirado el casco, el reanimador #1
mayor. regresa y se acomete la fijación de la colum-
na cervical desde arriba. Sólo en este momen-
Ante todo se deben tener las precauciones to el #2 puede soltar la fijación que venía ha-
universales de seguridad en la escena y utili- ciendo desde abajo. Se mantiene la fijación y
zar los Elementos Personales de Protección la neutralidad de la columna cervical hasta que
personal (EPP). el paciente sea colocado en una tabla larga y
se le apliquen los estabilizadores laterales de
El primer reanimador (#1) que llega al pacien- columna cervical.
te, procede a fijarlo desde el casco; si hay que
girarlo para dejarlo en decúbito, la maniobra
se debe realizar en bloque. El reanimador #2 LECTURAS RECOMENDADAS
desabrocha la correa de sujeción al mentón o
la corta según necesidad. El segundo reani- 1. American Academy of Orthopaedic Surgeons
mador (#2) fija del cuello desde abajo, y el #1 (AAOS), Browner B. Emergency Medicine. Care
and transport of the sick and injured. 8 th edition.
comienza a retirar el casco con movimientos
Jones and Bartlett Publishers, Sudbury,2001.
cortos y repetitivos, soltándolo del mentón y 2. Campbell B. Basic Trauma Life Support. Prentice
de la parte posterior de la cabeza, sin mover Hall Health. New York, 2000.
la columna cervical. Estos movimientos deben 3. Cruz Roja Colombiana y Alcaldía Mayor de Bogo-
ser suaves y coordinados entre los dos reani- tá, Curso Básico Rescate Vehicular. Bogotá DC,
madores (si el paciente usa lentes, se deben 2000.
retirar antes de quitar el casco). 4. Fundación de Valdecilla. Manual del Curso. Téc-
nico en transporte sanitario. España. Universi-
dad Nacional - CEMU. Bogotá, Colombia, 2000.
El reanimador #1 continúa hasta retirar total-
5. NAEMT, American College of Surgeons.
mente el casco, mientras el #2 continua fijan- Prehospital Trauma Life Support (PHTLS), 5th
do la columna cervical desde abajo. En este edition. Mosby. St Louis, 2002.
paso hay que tener precaución, ya que la ca- 6. National Safety Council, American Academy of
beza va a quedar suspendida en el aire por el Orthopaedic Surgeons. First Responder. Jones
espacio posterior que ocupaba el casco; el and Bartlet Publisehers. Baltimore, 2000.

78
CAPÍTULO VII: TRANSPORTE AÉREO DEL PACIENTE TRAUMATIZADO

CAPÍTULO VII

Transporte aéreo del paciente traumatizado

Arturo Vergara, MD
Hospital Central de la Policía
Bogotá

E l transporte aéreo puede cumplir papel de


especial trascendencia y utilidad en los
grandes cataclismos como terremotos, erup-
ciones atmosféricas y los equipos disponibles
abordo.

ciones volcánicas, deslaves y demás conse- Durante el vuelo se mantiene monitorización


cuencias de las fuerzas de la naturaleza que y registro de las variables fisiológicas y clíni-
afectan poblaciones enteras a las que es nece- cas; se establece comunicación permanente
sario evacuar pronta y profesionalmente. Sin con el hospital base o con unidades receptoras
embargo, el transporte aéreo implica riesgos en tierra para coordinar el traslado secundario
que deben ser medidos y evaluados para uti- a otra institución o dentro del hospital receptor
lizarlo de manera óptima. si posee helipuerto; hay que informar la natu-
raleza de las lesiones para que se pueda pre-
parar la infraestructura médica, de equipos y
PRECAUCIONES ANTES DEL VUELO recursos para la atención de la o las víctimas
al llegar a su destino.
La reanimación básica y avanzada previa al
transporte de un paciente por aire, incluye as- El comité de traumatismos y soporte vital de
piración de secreciones y oxigenación del pa- politraumatizados del American College of
ciente con mascarilla, intubación orotraqueal Surgeons ha promulgado una serie de reco-
si está indicada, inmovilización espinal, cervi- mendaciones para determinar la necesidad de
cal y pélvica, reposición enérgica de volumen transporte interhospitalario de los pacientes
con Lactato de Ringer para optimizar la vole- críticos a los centros de traumatología espe-
mia, férulas, drenaje de hemotórax o neumotó- cíficos. Estas incluyen:
rax, control de hemorragia y demás acciones
ya bien estandarizadas. Se evita el traslado • Lesión neurológica con Glasgow menor de
de pacientes inestables de modo que las inter- 10, estable y tratada.
venciones terapéuticas en vuelo sean míni- • Heridas penetrantes o fracturas deprimidas
mas, lo que a su vez evita lesiones iatrogéni- de cráneo, o pacientes con signos neurológi-
cas. El plan de vuelo y transporte del paciente cos de lateralización, con situación estable.
está a cargo del médico, quien en colaboración • Sospecha de lesiones cardíacas o vascula-
con los pilotos determina altura de vuelo, velo- res intratorácicas o gran traumatismo de
cidad, aceleración de despegue y aterrizaje, pared torácica.
etc. Para el traslado se deben considerar la • Los pacientes de edades extremas (meno-
factibilidad del vuelo, la gravedad del paciente, res de 5 años o mayores de 55 años de
las contraindicaciones de traslado, las condi- edad) o aquellos con alteraciones fisiológi-

79
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cas preexistentes conocidas (por ejemplo, Todo paciente que se traslada está sometido
enfermedad cardiorrespiratoria) pueden ser a una serie de situaciones causadas por la
tenidos en cuenta para que reciban aten- fuerza de la gravedad, cambios en la tempera-
ción en centros especializados. tura, cambios en la altitud, ruidos y vibracio-
nes, que inevitablemente afectan tanto al pa-
No existen reglas organizadas que cubran el ciente como al equipo responsable de su tras-
espectro de los pacientes quirúrgicos no-trau- lado; todas esas circunstancias influyen sobre
máticos u otros problemas médicos. El análi- la fisiología normal, lo que en el individuo sano
sis final y la decisión de trasladar a un pacien- no trae mayores repercusiones pero en pa-
te crítico se basan en la valoración de los be- cientes graves afecta las respuestas orgáni-
neficios que se piensa obtener con el trans- cas, la monitorización y la infusión de medi-
porte y los riesgos asociados. camentos.

Al someter el cuerpo a las fuerzas de acelera-


CONTRAINDICACIONES DE ción y desaceleración propias de los vehícu-
TRASLADO AÉREO EN TRAUMA los de transporte aéreo, así como a la altitud,
se producen variaciones en las fuerzas de
ABSOLUTAS inercia que actúan sobre órganos lesionados.
Es de vital importancia comprenderlas para
• Paro cardio-respiratorio de menos de 48 poder atenuar posibles daños.
horas de evolución o descompensado por
trastornos del ritmo. El transporte aéreo en helicóptero no ocasio-
• Shock descompensado hipovolémico, car- na fuerzas de aceleración y desaceleración
diogénico o séptico. superiores a 0,5 G (gravedades) en el eje sa-
• Neumotórax o hemotórax no drenado. gital; como el organismo normalmente esta so-
• Hipertensión endocraneal severa no tratada. metido a una fuerza G de 9,81 m/s 2 no parece
• Enfermedad por descompresión (buzos). que este incremento pueda afectar notable-
• Embarazo con sufrimiento fetal agudo. mente al paciente. Las fuerzas gravitacionales
• Pronóstico fatal precoz. son un poco más altas en sentido vertical o
transverso por influencia del despegue y del
Relativas aterrizaje pero en general son bajas, aunque
• Insuficiencia respiratoria aguda no tratada. podrían causar algunas alteraciones en per-
• Drenaje pleural retirado recientemente (3 sonas con inestabilidad hemodinámica de ori-
días). gen neurovegetativo, o con aumento de la PIC
• Cirugía intestinal (que implique sutura intes- (Presión Intra-Craneana) en pacientes con
tinal o gastroesofágica) en los primeros 10 TCE (Trauma Cráneo Encefálico), aunque
días de evolución y cirugía ocular reciente. estas alteraciones son menores comparadas
• Trauma craneo-encefálico con Glasgow con las que ocurren en el transporte terrestre.
menor o igual a ocho, no intubado.
• Anemias moderadas o severas, no Otro de los aspectos que deben tenerse en
tratadas. cuenta es el ruido que producen estos vehícu-
• Fracturas mandibulares complicadas en los de transporte; aunque es baja la repercu-
paciente no intubado. sión clínica, no deja de afectar al paciente y al
• Inestabilidad hemodinámica refractaria a personal que traslada, lo que origina proble-
medidas habituales. mas de comunicación y en ocasiones dolor

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CAPÍTULO VII: TRANSPORTE AÉREO DEL PACIENTE TRAUMATIZADO

especialmente si hay trauma acústico (explo- REQUERIMIENTOS BÁSICOS PARA


siones, rupturas timpánicas, etc.). EL TRANSPORTE AÉREO
Las vibraciones ocurren en rangos de 12-10 Sea cual fuere el proceso patológico del pa-
Hz, fuera del rango de peligro, pero hay publi- ciente, se deben tener en cuenta algunas nor-
caciones sobre arritmias o descompensacio- mas básicas obligatorias para el transporte
nes cardiacas cuando las vibraciones tienen aéreo:
efectos de resonancia en los órganos.
• Asegurar la vía aérea; si es preciso intubar
La altura es tal vez el fenómeno físico que más o hacer cricotiroidotomia.
afecta al organismo y tiene que ver con la pre- • Acceso intravenoso.
sión atmosférica, los cambios de temperatura • Monitorización cardiaca.
y alteraciones en la oxigenación. La disminu- • Asegurar el paciente y si es necesario
ción en la presión atmosférica aumenta la ex- inmovilizarlo.
pansión gaseosa y afecta los órganos hue- • Colocar sonda nasogástrica, si no hay con-
cos; esto se traduce clínicamente en: traindicación, en los pacientes con traumas
múltiples o inconscientes.
• Distensión del tubo digestivo. • Practicar glucometría en pacientes con
• Aumento de la PIC. estado mental alterado.
• Aumento en los neumotórax sin drenar
(30% a 2.500 m). Los pacientes menores de un año deben te-
• Intensificación de edemas, edema de las ner glucometria previa al vuelo. Todos los me-
alturas. dicamentos infundidos en forma endovenosa
• Aumento de la presión intraocular. deben estar debidamente rotulados.
• Aumento del volumen timpánico y del con-
tenido de senos paranasales. Las infusiones de heparina deben ser lavadas
• Expansión del área en heridas y suturas. antes de iniciar el viaje para asegurar la per-
meabilidad de la vía. Administrar oxígeno se-
En helicópteros y aviones no presurizados, gún necesidades y altura del vuelo.
individuos sanos que llegan a alturas hasta
de 1.000 m logran mantener presiones alveo- Drenar neumotórax antes del vuelo y reem-
lares de oxígeno de 85 mmHg con saturación plazar los sistemas de drenaje por válvulas
de 95%; a mayores alturas disminuye la PaO 2. unidireccionales. No usar sistemas de drena-
je cerrado a grandes alturas.
El descenso de la presión parcial de O 2 agrava
la insuficiencia respiratoria y los trastornos de Es importante recordar que el material se ve
transporte de oxígeno en bronconeumonía, afectado por el transporte aéreo así:
anemia, hipovolemia, edema pulmonar y shock,
lo que obliga a aumentar el flujo de oxígeno. La altura aumenta la expansión de los gases
y, por lo tanto, hay que disminuir el volumen
total del gas pero mantener la concentración,
no llenar las botellas de O2 al máximo.

Vigilar muy atentamente las infusiones de lí-


quidos y fármacos.

81
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las vibraciones alteran el monitoreo y pue- ciones por personal que tenga capacitación y
den desnaturalizar algunos medicamentos. que sepa sortear las alteraciones fisiológicas
que se presentan durante el vuelo. Durante el
Los cambios en la temperatura alteran la transporte aéreo deben evitarse intervenciones
composición de los medicamentos y de los que puedan desembocar en altos índices de
sistemas de monitoreo que utilizan baterías iatrogenia o incluso comprometer la bioseguri-
de Níquel-Cadmio dad del personal a cargo del transporte; este
tipo de vehículo está diseñado para extraer al
La aceleración-desaceleración varía la per- paciente, de manera que rápidamente llegue a
fusión de micro goteos, por lo que se deben hospitales que cuenten con los recursos para
utilizar bombas de infusión especialmente en optimizar la atención; es de vital importancia
administración de fármacos tipo vasoactivos asegurar una comunicación fluida entre la en-
o nitoprusiato etc. tidad receptora y el vehículo de transporte con
el fin de adecuar la recepción, asegurar dispo-
nibilidad humana, de recursos y tecnológica
CONCLUSIONES para la atención del paciente. El control clínico
debe ser permanente y debe incluir valoración
El transporte aéreo es seguro cundo se cuenta neurológica, estado general, escala de Glas-
con personal entrenado y capacitado; son múlti- gow, nivel de sedación, temperatura, balance
ples las variables para tener en cuenta, lo que hídrico, monitorización circulatoria y monitori-
hace imprescindible el manejo de estas situa- zación respiratoria no invasoras.

TABLA 1. MATERIAL DE TRANSPORTE

Soporte ventilatorio Tubo endotraqueal o traqueostomía, Respirador portátil, Bolsa de ventilación con mascarilla y
reservorio, Fuente de oxígeno, Aspirador.

Soporte hemodinámico Monitor de ECG y/o desfibrilador, Presión arterial no invasora, Monitor de presión, Monitorización
respiratoria: Pulsoxímetro, Espirómetro de Wright, Capnógrafo.

Otros Bombas o jeringas de perfusión, Laringoscopio, Drogas y líquidos, Tubo de drenaje de tórax,
Acceso venoso.

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Archer JH, Pearl RG, Hackel AA. Transporte aé- 3. Fromm RE, Dellinger RP. Transport of critically ill
reo de los pacientes críticos. En: Tratado de Anes- patients. J Intensive Care Med 1992; 7:223-233.
tesia en el Paciente Traumatizado y en Cuidados 4. Gabram SG, Jacobs LM. The impact of emergency
Críticos. Editado por: CM Grande. Mosby/Doyma medical helicopters on prehospital care. Emerg
Libros. Madrid, 1994. Med Clin North Am 1990; 8:85-102.
2. Dedrik DK, Darga A, Landis D, Burney RE. 5. Guidelines Committee of the American College of
Defibrillation safety in emergency helicopter Critical Care Medicine; Society of Critical Care
transport. Ann Emerg Med 1989; 18:69-71. Medicine and American Association of Critical Care

82
CAPÍTULO VII: TRANSPORTE AÉREO DEL PACIENTE TRAUMATIZADO

Nurses transfer guidelines task force. Guidelines 10. Olson CM, Jastremski MS, Vilogi JP, et al.
for the transfer of critically ill patients. Crit Care Stabilization of patients prior to interhospital
Med 1993; 21:931-937. transfer. J Trauma 1989; 29: 1497-1499.
6. Hotvedt R. Which groups of patients benefit from 11. Ridley S, Carter R. The effects of secondary
helicopter evacuation?. Lancet 1996; 347:1362- transport on critically ill patients. Anaesthesia 1989;
1366. 44:822-827.
7. Mezzetti MG. Transporte de cuidado critico por tie- 12. Runcie CJ, Reeve WG, Reidy J, et al. Blood
rra y por mar. En: Tratado de Anestesia en el Pa- pressure measurement during transport.
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8. Moylan JA. Impact of helicopters on trauma care patients stabilized by standard inmobilization
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helicopter transport of urban trauma patients. J Air ambulance trauma transport: a quality review.
Trauma 1996; 41:886-891. J Trauma 1996; 41:26-31.

83
CAPÍTULO I: TRANSFUSIÓN AUTÓLOGA EN TRAUMA

CAPÍTULO I

Transfusión autóloga en trauma

Fernando Arias, MD
Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

Rocío Santamaría, MD
Jefe de Internos Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

L a transfusión autóloga o autotranfusión


consiste en la recolección y reinfusión a
la circulación de la sangre del mismo pacien-
causan la hipotermia y la hipovolemia
(arritmias cardiacas y muerte).
5. No existe el riesgo de transmisión de en-
te con el ánimo de reemplazar el volumen per- fermedades infecciosas (VIH, hepatitis,
dido. La autotransfusión de emergencia invo- malaria, citomegalovirus, etc.).
lucra la recuperación de la sangre derramada 6. Los niveles de 2,3 DPG son mayores en
en una cavidad por efecto de un trauma, usual- los glóbulos rojos de sangre autotransfun-
mente el tórax o la cavidad abdominal. Tam- dida que en sangre homóloga almacenada.
bién se puede realizar de manera electiva, 7. Menor riesgo de hipocalcemia o hiperca-
previa a una intervención quirúrgica, en la que lemia.
se prevé la necesidad de reposición sanguí- 8. Menor riesgo de sobrecarga hídrica y de-
nea. Esta guía considera únicamente las indi- sarrollo del síndrome de rehidratación agu-
caciones y el empleo de la autotranfusión en da (SDRA).
el tratamiento del shock en el paciente con 9. Puede ser una alternativa en pacientes, que
trauma torácico durante su evaluación y ma- por convicción religiosa, no aceptan la
nejo en el servicio de urgencias. transfusión de componentes alógenos. Al-
gunos testigos de Jehová aceptan la técni-
ca siempre y cuando la sangre se manten-
VENTAJAS ga en un sistema de flujo extracorpóreo
continuo.
1. Rápida disponibilidad (minutos). 10. Permite la preservación de unidades del
2. No hay riesgo de incompatibilidad. Dismi- banco de sangre para ser usadas en otros
nuye la posibilidad de reacciones transfu- individuos.
sionales.
3. Es un procedimiento costo-efectivo: no es
necesaria la hemoclasificación, ni las prue- INDICACIONES
bas cruzadas o el rastreo de infecciones.
4. La sangre, recuperada y reinfundida inme- 1. Cualquier paciente en shock hipovolémico
diatamente, reduce las complicaciones que (paciente inestable) que requiera transfu-

87
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sión sanguínea urgente sin que haya dispo- RECURSOS NECESARIOS


nibilidad de transfusión homóloga. El pa-
ciente ideal es aquel con trauma torácico Las características que se deben buscar en
que requiera una toracostomía cerrada y un dispositivo de autotransfusión según Ma-
en quien se obtenga inmediato drenaje de ttox son:
sangre. Se debe considerar en pacientes a. Fácil ensamblaje.
con indicaciones de toracotomía de emer- b. Costo-efectividad.
gencia. Si bien el uso de sangre contami- c. Fácil operación.
nada (sangre de heridas de más de seis d. Microfiltración.
horas de evolución o que ha tenido contacto e. Minimización de interfases aire-líquido.
con material gastrointestinal) está contra- f. Anticogulación simple.
indicado, puede usarse cuando no hay dis-
ponibilidad de otro sustituto únicamente en Equipo:
aquellas condiciones extremas en que la • Unidades recolectoras. Bolsas de transfu-
vida del paciente depende de la transfusión. sión sanguínea.
2. Cualquier paciente con hemotórax que re- • Anticoagulantes (heparina o citrato de sodio
quiera transfusión sanguínea y en quien en forma de citrato-fosfato-dextrosa).
una radiografía de tórax (paciente estable) • Filtros sanguíneos.
sugiera una cantidad importante de sangre • Equipo para transfusión sanguínea.
en el mismo (>500 mL) y que tenga un cua- • Equipo de toracostomía cerrada.
dro clínico de hemorragia grado II-III según
el American College of Surgeons. También
se puede utilizar como suplemento a la RECOLECCIÓN
transfusión homóloga mientras ésta se en-
cuentra disponible y pueda practicarse. En los casos de colecciones en el tórax puede
3. Cualquier paciente con hemotórax que re- utilizarse una bolsa de flebotomía (comúnmen-
quiera transfusión sanguínea urgente y cu- te usadas por los bancos de sangre) que tiene
yas creencias religiosas limiten el uso de aguja calibre 18 y que ya tiene citrato de sodio
sangre homóloga. como anticoagulante.

Algunos autores recomiendan la punción di-


CONTRAINDICACIONES recta del tórax con la aguja de la bolsa recolec-
tora. Dependiendo del calibre y del material
1. Tumor maligno en la cavidad de recolec- de la aguja pueden causarse lesiones a va-
ción sanguínea. sos intercostales, parénquima pulmonar,
2. Insuficiencia renal o hepática. diafragma, corazón e incluso a estructuras
3. Sangre contaminada: tiempo de evolución intraabdominales.
de la herida superior a seis horas.
4. Contaminación directa con material gastro- Una vez colocado el tubo de tórax, éste se
intestinal. Trauma pancreático o trauma de pinza a nivel distal y se punciona con la aguja
intestino proximal, debido a la posibilidad de la bolsa para desviar el drenaje hacia ella.
de infusión de grandes cantidades de enzi- Una vez recolectada la sangre, la bolsa se
mas pancreáticas a la circulación sistémica. desconecta del tubo de drenaje y se invierte,
5. Infecciones intratorácicas. conectándose a una línea venosa de buen
calibre para reinfusión a través de un filtro.

88
CAPÍTULO I: TRANSFUSIÓN AUTÓLOGA EN TRAUMA

Los equipos de transfusión sanguínea suelen PRECAUCIONES


tener filtros para microcoágulos.
Se sugiere el uso de una bolsa para cada pro-
cedimiento, la cual luego se deberá descartar.
ANTICOAGULACIÓN
La sangre recolectada no debe infundirse lue-
Se recomienda la utilización de citrato-fosfato- go de un tiempo prolongado y debe colocarse
dextrosa (CPD): 25–70 mL de CPD por cada lo antes posible, ojalá antes de transcurridas
500 ml de sangre recolectada. Debe mante- 4 horas.
nerse una relación no menor de 1 parte de
CPD por 10 partes de sangre. Si la sangre se coagula en la bolsa, en el
equipo o durante su infusión, ésta se deberá
Las bolsas de flebotomía de los bancos vienen descartar.
con 67 mL de anticoagulante para cada unidad.
Se debe estar muy atento en relación con la
purga de las líneas y equipos de infusión para
FILTRACIÓN evitar el embolismo aéreo.

Se recomienda el uso de cualquier forma de La infusión rápida de sangre anticoagulada


filtración durante la reinfusión para minimizar con citrato puede causar toxicidad y depresión
el riesgo de microembolismo, ojalá con filtros miocárdica. Se evidencia porque el paciente
con tamaño de poros entre 20 y 170 micras. se queja de disestesias peribucales, dolor
Un tamaño de 40 micras previene la microem- abdominal tipo cólico y arritmias cardiacas.
bolización sin aumento innecesario de la pre-
sión de filtración. Si se utilizan infusores la presión máxima re-
comendada es de 150 mmHg.

REINFUSIÓN Siempre que se transfunda sangre con riesgo


de contaminación o ya contaminada deberán
A través de una vena canalizada de calibre darse antibióticos con amplio cubrimiento para
adecuado (14-16G) se infunde la sangre re- anaerobios. No es necesario dar antibióticos
colectada en las bolsas de transfusión. Los cuando la sangre se ha recolectado del tórax
equipos de transfusión sanguínea tienen a su y de manera aséptica.
vez filtros para microcoágulos.

89
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COMPLICACIONES
Pueden agruparse en dos categorías:

HEMATOLÓGICAS NO HEMATOLÓGICAS
• Trombocitopenia • Bacteremia
• Hipofibrinogenemia. • Sepsis
• Aumento de los productos de • Microembolismo
degradación del fibrinógeno. • Embolismo aéreo
• Prolongación de los tiempos de coagulación.
• Hemólisis.
• Disminución del hematocrito.
• Aumento de los niveles circulantes de hemoglobina
libre (se precipita en túbulos renales y puede desen-
cadenar falla renal aguda).

La coagulopatía dilucional se presenta con Thora-Seal-III system (Sherwood Medical)


mayor frecuencia si la transfusión ha excedi- Thora-Klex system (Davol).
do los 3.500 ml. Se sugiere como fórmula prác-
tica infundir una unidad de plasma fresco con- La sangre también se puede recuperar de la
gelado por cada 2 unidades de sangre cavidad torácica o abdominal mediante siste-
autotransfundidas. La mayoría de las compli- mas de succión y recolección denominados
caciones hematológicas se corrigen entre 48 salvadores de células (cell savers) que se uti-
y 72 horas después sin ningún tratamiento lizan usualmente en las salas de cirugía, don-
especial, y la necesidad de reemplazar facto- de están disponibles. El nivel de succión debe
res de la coagulación o plaquetas deberá es- ser limitado para minimizar la hemólisis. Se
tablecerse por evaluación clínica. recomienda una presión de succión de 60
mmHg o menor para aspiración de hemotórax
o hemoperitoneo.
SISTEMAS PRE-ENSAMBLADOS
Existen en la actualidad varios sistemas co-
merciales listos para usar que tienen venta- LECTURAS RECOMENDADAS
jas y varían en los métodos de recolección
para las situaciones en las que se requiere 1. Vélez H. La autotransfusión en Medellín-Diez años
emplear la autotransfusión. de experiencia. Rev Col Cir 2000; 15:35-43.
Algunos ejemplos son: 2. Vélez H, Bernal A, Henao C. Autotransfusión. En:
Guias para Manejo de Urgencias. Ministerio de
Salud Federación Panamericana de Facultades
The Abbott Receptal autotransfusion system (Escuelas) de Medicina. Bogotá, 1996.
(Abbott Laboratories) 3. Orlinsky M, Shoemaker W, Reis E, et al. Current
Boehringer Autovac (Boehringer Laboratories) controversies in shock and resucitation. Surg Clin
Pleur-Evac autotransfusion device (Deknatel) North Am 2001; 81:1217-1262.

90
CAPÍTULO I: TRANSFUSIÓN AUTÓLOGA EN TRAUMA

4. Purcell T. Autotransfusion (Autologous Blood 8. Jacobs LM, Hsieh JW: A clinical review of
Transfusion) En: Roberts: Clinical Procedures in autotransfusion and its role in trauma. JAMA 1984;
Emergency Medicine. Tercera edición. WB. 251:3283-3287.
Saunders Company. Philadelphia, 1998. 9. Wightman J, Gladish S. Explosion and blast inju-
5. Hoffman G. Blood and blood components. ries. Ann Emerg Med 2001; 37: 664-678.
Autotransfusion. En: Marx: Rosen’s Emergency 10. Glover JL Autotransfusion of blood contaminated
Medicine: Concepts and Clinical Practice. Quinta by intestinal contents. JACEP 1978; 7: 142-144.
Edición. Mosby. St Louis, 2002. 11. Von Koch L. Wilson DW. Mattox KL. A practical
6. National Blood Resource Education Program method of autotransfusion in the emergency
Expert Panel. The use of autologous blood. JAMA center. Am J Surg 1977; 133: 770-772.
1990; 263:414-417. 12. Mattox KL. Blood availability for the trauma patient-
7. Jurovich GJ, Moore EE, Medina G. Autotransfusión autotransfusion. J Trauma 1975;15: 663-669.
in trauma: A pragmatic analysis. Am J Surg 1984; 13. Victorino G - Jehovah’s Witnesses: unique
148:782-785. problems in a unique trauma population. J Am, Coll
Surg 1997; 184: 458-468.

91
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO II

Reanimación cardio-cerebro-pulmonar

Laureano Quintero, MD
Jefe, Servicio de Urgencias
Hospital Universitario del Valle.
Facultad de Salud, Universidad del Valle

L a gran responsabilidad al enfrentar situa-


ciones de paro cardiorrespiratorio no pue-
de dejarse al azar; todo servicio de urgencias
contacto firme con sus manos sobre el hom-
bro o el tórax y lo llama con voz fuerte y clara:
“¿Qué le ocurre? Abra los ojos por favor”.
debe mantener sistemas organizados de res-
puesta a tales situaciones, de modo que las Omitir este sencillo pero significativo paso,
víctimas obtengan todos los beneficios posi- pone en riesgo la iniciación de intervenciones
bles, a la luz de los más modernos conceptos al suponer que existe paro cardiorespiratorio
y conocimientos. En Norteamérica y gran parte cuando solamente se trata de inconsciencia
de Europa ocurre así, con evidente disminu- transitoria o incluso de alguien apenas aturdi-
ción de la mortalidad y aun de la morbilidad do y que sí responda al llamado.
después de paro cardíaco.
Si se sospecha trauma, se evita sacudir brus-
Estos son los esquemas recomendados para camente al paciente y la movilización inade-
abordar sistemáticamente la Reanimación cuada de la columna vertebral cervical.
Cardiopulmonar.
Siempre se deben tomar las medidas de
bioseguridad, para evitar riesgos de contami-
ESQUEMA A–B–C–D PRIMARIO nación: lentes de protección, guantes y dis-
positivos de barrera que eviten el contacto
Al atender una situación de emergencia car- directo con la vía aérea y con las secreciones
diorespiratoria o ante un paciente en aparente potencialmente contaminantes del paciente.
colapso cardiovascular, se asume una secuen-
cia de acciones ordenadas que eviten omisio-
nes y prevengan errores, como el exceso de 2. ACTIVACIÓN DEL SISTEMA DE RESPUESTA,
intervención o intervenciones incompletas. EVITANDO TRABAJAR SOLO

Cuando se compruebe que la persona no res-


1. CONTACTO ponde a la voz, se debe llamar al equipo de
trabajo. El servicio de urgencias debe tener
Se determina, en primer lugar, la falta o pre- códigos que identifiquen las diversas emer-
sencia de respuesta en el paciente. El reani- gencias y convoquen de inmediato la activi-
mador se coloca al lado del paciente, hace dad del personal.

92
CAPÍTULO II: REANIMACIÓN CARDIO-CEREBRO-PULMONAR

La reacción frente a situaciones de paro car- siones cardiacas que eventualmente se re-
diorespiratorio ha sido organizada en muchos quieran exigen que los b
hospitales del mundo con base en la premisa razos del reanimador estén en ángulo recto a
de que el equipo con mejor entrenamiento y 90 grados con respecto al paciente.
con pautas de manejo sistematizadas ofrece
la oportunidad óptima de supervivencia para El servicio de urgencias debe contar con una
un paciente en colapso. Todo el personal de tabla firme y de diseño adecuado, que se co-
urgencias debe estar preparado cuando me- loca bajo la espalda del paciente antes de ini-
nos para ofrecer soporte vital básico y para ciar maniobras de soporte.
solicitar apoyo al equipo con más experiencia,
por el medio que cada institución defina. El El paciente estar en decúbito supino, prote-
término mas difundido es el de “Código Azul”, giendo la columna vertebral y evitando ma-
aunque naturalmente cada entidad es libre de niobras deletéreas si existe sospecha o con-
fijar sus códigos de acuerdo con su realidad. firmación de lesión raquimedular.

Cuando el paciente no responde al llamado,


se procede a activar un escenario de respuesta 4. ABCD PRIMARIO
que no genere caos, angustia, desorden ni des-
perdicio de recursos en el servicio de urgencias. A. Vía Aérea. ¿El paciente respira o no respira?
Se utiliza el teléfono para pedir apoyo ante la Primero se evalúa la vía aérea. Se explora la
situación de emergencia, especificando el lugar boca para extraer cuerpos extraños y se veri-
donde ocurre el evento y en caso de que no se fica si hay respiración espontánea adecuada.
disponga allí de carro de paro o equipos ade- Si hay secreciones abundantes o material li-
cuados de reanimación avanzada, se solicitan quido, se aspira la cavidad oral.
estos elementos con carácter de urgencia.
Cuando existe inconsciencia, el tono muscu-
Toda sección hospitalaria debe contar por lo lar se hace insuficiente y la lengua tiende a ir
menos con equipos de soporte vital básico hacia atrás, ocluyendo la vía aérea. La inser-
(cánulas orofaringeas, nasofaringeas, dispo- ción de la lengua en la parte posterior del ma-
sitivos bolsa-válvula-máscara) y con posibili- xilar inferior permite que al desplazarlo hacia
dades de acceso rápido a equipos de soporte delante, aquella se aleje de la pared posterior
cardiopulmonar avanzado (desfibrilador, me- y despeje “el camino”. En este paso, hay que
dicamentos de paro, laringoscopio, tubos oro- evitar apoyarse en los tejidos blandos sub-
traqueales, etc). mentonianos, ya que esto podría de por sí
obstruir la vía aérea.
Hecho el contacto y habiendo solicitado apo-
yo al equipo de trabajo, se procede con el si- Si no hay sospecha de trauma craneoencefá-
guiente paso. lico o cervical, se coloca una de las manos
del reanimador en la frente del paciente y la
otra en el mentón, y se extiende suavemente
3. POSICIÓN ADECUADA DEL PACIENTE la cabeza hacia atrás al tiempo que se eleva
Y DEL REANIMADOR el mentón.

El médico se debe ubicar a un lado del pa- Si se sospecha o confirma trauma craneoen-
ciente, a una altura adecuada. Las compre- cefálico o raquimedular, se procede con la

93
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

maniobra de tracción mandibular mantenien- de broncoaspiración y determinar, de acuerdo


do en posición neutra la columna cervical: se con los protocolos de la institución, las causas
coloca una mano a cada lado de la cabeza y el manejo del estado de inconsciencia.
del paciente, se apoyan los codos sobre la
superficie en la que descansa éste, se sujetan Si el paciente no respira o hace esfuerzos dé-
los ángulos del maxilar inferior y se elevan con biles o inadecuados para respirar, se necesi-
ambas manos, desplazando la mandíbula ta rápida intervención con maniobras que brin-
hacia adelante. den apoyo efectivo.

Aunque esta última maniobra puede ser B. No hay respiración. Inicio de la respiración
aprendida como entrenamiento básico, exige de apoyo
claridad operacional y agota al operador con Si el paciente no respira, se deben tomar me-
rapidez. didas que soporten esta función vital.

Una vez abierta la vía aérea, con la maniobra La respiración boca a boca es una manera
cabeza-mentón o con la maniobra de trac- rápida y efectiva para suministrar alguna frac-
ción mandibular, se determina si el pacien- ción de oxígeno, ya que el aire que espiramos
te está respirando. contiene suficiente oxigeno para satisfacer las
necesidades de soporte. Teóricamente debe
En los manuales de reanimación básica se re- mantenerse abierta la vía aérea del paciente,
comienda la maniobra M-E-S: Mirar, Escuchar ocluir la nariz y sellar su boca con la boca del
y Sentir, en la cual el reanimador acerca su reanimador. Se procede a una inspiración pro-
oreja a boca y nariz del paciente dirigiendo la funda y ocluyendo la boca del paciente con la
mirada hacia el tórax y el abdomen; comprue- boca, se sopla lentamente por 2 segundos ca-
ba visualmente si se mueven el tórax y el ab- da vez, comprobando visualmente que el tó-
domen con la respiración; determina si siente rax se expande con cada insuflación; se pro-
el aire espirado en la oreja que coloca cerca grama una ventilación cada 4 a 5 segundos,
de boca y nariz y si escucha la respiración de de manera que se cumplan unas 10 a 12 res-
la víctima, todo esto tras destapar tórax y ab- piraciones por minuto.
domen del paciente. Esta maniobra toma en-
tre 7 y 10 segundos. Se recomienda realizar 2 a 5 respiraciones
iniciales y luego valorar los resultados de la
Las maniobras Cabeza-Mentón y Tracción maniobra.
Mandibular permiten que, en ocasiones, vícti-
mas que no respiraban inicien su respiración La respiración boca a boca implica el riesgo
nuevamente al facilitar la circulación de aire de insuflación gástrica, regurgitación, bronco-
por la vía respiratoria. aspiración y neumonía. Por ello, se deben te-
nerse en cuenta algunos puntos técnicos.
Si el paciente respira adecuadamente y no res-
pondió al llamado, se trata de una víctima in- En primer lugar se recomienda, para reducir
consciente que requiere atención especial y el riesgo de insuflación gástrica, suministrar
manejo integral por el equipo del servicio de respiraciones lentas con el volumen corriente
urgencias, pero no requiere maniobras de rea- mínimo necesario para logra expansión torá-
nimación cardiopulmonar ni de soporte respi- cica visible con cada ventilación. Esto implica
ratorio avanzado; se debe proteger de riesgos proporcionar unos 10 mL/kg en el adulto (unos

94
CAPÍTULO II: REANIMACIÓN CARDIO-CEREBRO-PULMONAR

700 a 1.000mL) en un lapso de dos segun- reanimador debe tratar de suministrar volu-
dos. (nivel de evidencia IIA). men corriente de 6 a 7 mL/kg o alrededor de
400 a 600 mL en uno a dos segundos (nivel
Si los intentos de ventilación no son efectivos, de evidencia IIB). Como en el contexto clínico
es decir, si no se logra expansión torácica visi- no es fácil determinar dicho volumen corriente,
ble, hay que tener en cuenta que la causa más el reanimador debe optar por ofrecer un volu-
común es la posición incorrecta de la cabeza men corriente que mantenga la saturación de
y el mentón. Se corrige dicha posición y se oxigeno y provoque expansión torácica visible.
intentan de nuevo las ventilaciones. Si aun con
excelente posición no se logra, se debe con- Si no hay oxígeno suplementario, el reanima-
siderar de inmediato la posibilidad de obstruc- dor debe intentar suministrar el mismo volu-
ción de vía aérea por un cuerpo extraño y se men corriente de aire, recomendado en la res-
procede de acuerdo con los correspondien- piración boca a boca (10 mL/kg, 700 a 1.000
tes protocolos. mL) en 2 segundos.

El temor y los riesgos de adquirir enfermeda- Considerando que la lengua es un potencial


des infecciosas durante la maniobra de respi- obstáculo para el adecuado flujo de aire, es
ración boca a boca han obligado a considerar recomendable y casi obligatorio colocar cánula
alternativas operacionales frente al evento de orofaríngea antes de usar el dispositivo bol-
paro cardiorrespiratorio. Si una persona no sa-válvula-máscara. Además, si se cuenta con
desea o no está capacitada para practicar ven- un tercer reanimador, se recomienda que
tilación boca a boca en un adulto, debe prac- mientras dos maniobran el dispositivo bolsa-
ticar por lo menos RCP con compresiones válvula-máscara, el otro aplique presión cricoi-
(evidencia Clase IIa). dea suave pero firme de tal forma que se pre-
venga insuflación gástrica excesiva, la cual
El resultado de compresiones torácicas sin tiene riesgos mayores de regurgitación y as-
ventilación boca a boca es significativamente piración; esta presión solamente se aplica
mejor que ninguna RCP en caso de paro car- en pacientes inconscientes.
diaco en adultos. Incluso se pregona cierta evi-
dencia de que la ventilación con presión posi- C. Circulación. Verificación del pulso. De
tiva no es esencial durante los primeros 6 a acuerdo con los hallazgos, iniciar compre-
12 minutos de la RCP en el adulto. siones
Comprobada la ausencia de respiración e ini-
Para proporcionar soporte ventilatorio inicial ciado el soporte respiratorio con dos o cinco
en los servicios de urgencias se cuenta usual- insuflaciones, se procede a examinar el com-
mente con dispositivos bolsa-válvula-masca- ponente circulatorio. La ausencia de pulso in-
rilla con volumen de alrededor de 1.600 mL. dica paro cardiaco y necesidad de practicar
Son más fáciles de usar cuando actúan simul- compresiones torácicas; este dato, sin embar-
táneamente dos reanimadores, ya que uno go, no es absoluto porque puede ser difícil
solo puede tener dificultades para lograr el palpar el pulso en algunas personas.
volumen corriente deseado.
El lugar indicado para palpar el pulso es la
Cuando se dispone de oxígeno suplementa- arteria carótida del lado más cercano al exa-
rio (lo cual es ideal), se deben utilizar veloci- minador. Se mantiene extendida la cabeza del
dades de flujo de 8 a 12 litros por minuto y el paciente con una mano sobre la frente (si no

95
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

hay contraindicación por trauma) y se localiza vidual definitivo para la supervivencia. Así
el cartílago tiroideo; se deslizan dos dedos en mismo, la tasa de supervivencia luego del paro
el surco entre la tráquea y los músculos late- cardiorrespiratorio por fibrilación ventricular,
rales del cuello y se aplica presión suave a fin disminuye de 7% a 10% por cada minuto de
de no colapsar la arteria; ahora se concentra demora en la desfibrilación.
la atención en detectar durante cinco a diez
segundos si hay pulso palpable. Si no hay pul-
so palpable, se inician compresiones torá- RESUMEN DE LA SECUENCIA
cicas. CRÍTICA INICIAL

Las compresiones torácicas generan flujo san- Al detectar o sospechar en el servicio de ur-
guíneo al aumentar la presión intra torácica. gencias una situación de colapso cardiores-
Se considera que la sangre bombeada hacia piratorio los pasos que deben ejecutarse son:
los pulmones por las compresiones torácicas,
acompañadas de soporte ventilatorio, suminis- • Contacto con el paciente.
tran una cantidad adecuada de oxígeno a los • Activación de la alarma (por ejemplo, sis-
órganos vitales hasta que se inicien maniobras tema “Código Azul”) si el paciente no res-
avanzadas. ponde.
• Aplicación del ABCD primario:
Las recomendaciones actuales sugieren una A: Vía Aérea: el paciente respira o no res-
frecuencia de 100 compresiones por minuto pira.
(evidencia Clase IIb) para lograr flujo sanguí- B: Buena respiración (breathing): si no res-
neo anterógrado adecuado durante la RCP. pira, se practican de dos a cinco venti-
La relación entre ventilaciones y compresiones laciones de soporte de acuerdo con el
en los adultos, sean efectuadas por un sólo protocolo local.
reanimador o por dos, debe ser de 15 por 2 C: Circulación. Si no hay pulso ni signos
(evidencia Clase IIb), es decir, 15 compresio- de circulación, se inician compresiones
nes por 2 ventilaciones, ya que esta secuen- en secuencia 15:2 estando solo o acom-
cia permite practicar mas compresiones torá- pañado, 15 compresiones por dos ven-
cicas por minuto. tilaciones.
D: Desfibrilación. Se determina si hay fibri-
Las compresiones deben practicarse sobre la lación ventricular o taquicardia ventricu-
mitad inferior del esternón (a la altura de las lar sin pulso. Si es así, se procede a des-
tetillas); los brazos del reanimador se ponen fibrilar y se inicia el ABCD secundario.
a 90 grados con respecto al tórax del pacien- Si no hay fibrilación ventricular, se con-
te, evitando doblar los codos y deprimiendo tinúa la RCP y se inicia el ABCD secun-
el tórax una tercera parte de su diámetro con dario.
cada compresión.

D. Desfibrilación 5. ABCD SECUNDARIO


La mayoría de los eventos de colapso cardio-
respiratorio no traumático en un paciente adul- El paciente puede continuar en paro cardio-
to se acompañan de fibrilación ventricular. El respiratorio a pesar de las maniobras del
tiempo entre el momento del colapso y la ma- ABCD primario y de la eventual descarga
niobra desfibriladora es un determinante indi- desfibriladora que se le aplique.

96
CAPÍTULO II: REANIMACIÓN CARDIO-CEREBRO-PULMONAR

Una vez efectuados los pasos iniciales, si per- resultado adecuado de la intubación. Aunque
siste la condición de colapso son necesarias el método más certero para comprobar una
nuevas medidas secuenciales criticas. Se or- adecuada intubación es que el operador veri-
dena Intubación, se compruebe que es ade- fique que pasó el tubo a través de las cuerdas
cuada, se canaliza una vena y se establece vocales, luego de la intubación se debe co-
monitorización continua. Se estudia el diag- rroborar el resultado.
nóstico diferencial.
• Se ausculta primero el epigastrio y se veri-
Vía Aérea: Asegurar la vía aérea; si indica- fica que el tórax se expande al insuflar a
do, se introduce un dispositivo través del tubo con el dispositivo bolsa-vál-
Si está en acción el soporte adecuado con dis- vula. Si escucha gorgoteo gástrico y no hay
positivo bolsa-válvula-mascarilla, utilizando cá- expansión torácica, se deduce que la intu-
nula orofaríngea, presión cricoidea y frecuen- bación es esofágica y se retira el tubo de
cia correcta, puede no ser necesario de inme- inmediato.
diato un procedimiento invasor; no se debe • Una vez retirado el tubo, se intente otra vez
precipitar desordenadamente. Se llama al equi- la intubación luego de preoxigenar por 15
po de intubación, se lo organiza, se preoxigena a 30 segundos con dispositivo bolsa-válvu-
el paciente y se procede con tranquilidad. la, administrando oxígeno al 100%. Nunca
se debe intentar la intubación con el mismo
Para practicar la intubación endotraqueal se tubo que llegó al esófago, por el riesgo de
parte del principio de que se sabe hacerlo y infección del árbol traqueo-bronquial.
se tiene suficiente experiencia. • Al Intubar y detectar sonidos adecuados en
ambos hemitórax, corroborados por juicio-
• Preparación del equipo de intubación: se sa auscultación comparativa en ápices, axi-
comprueba que el balón del tubo se en- las y bases, se proceda a fijar el tubo de
cuentra en buen estado. modo que no se desplace. El tubo debe
• Se preoxigena por 20 a 30 segundos con el pasar 1 a 2 cm más allá de las cuerdas
dispositivo bolsa-válvula-mascarilla. Si hay vocales.
respiración espontánea, la preoxigenación • Una vez fijado el tubo, se coloca una cá-
se puede lograr administrando alto flujo de nula orofaringea para evitar mordedura del
oxígeno durante tres minutos (siempre y tubo y se conecta a la fuente de oxígeno o
cuando exista buen volumen corriente). al dispositivo de ventilación escogido.
• Se aspira en caso necesario (unos diez
segundos). Circulación. Canalización de una vena.
• Se oxigena nuevamente. Monitorización constante del paciente
• Se intuba utilizando el laringoscopio con la Se colocan los electrodos y se conecta el
mano izquierda y manipulando el tubo con monitor, controlando todo el tiempo la evolu-
la derecha. ción del ritmo y correlacionándolo con la con-
• Se infla el balón. dición del paciente.

Buena ventilación. Se confirma siempre la Si hay pulso palpable, se determine la pre-


correcta posición del tubo y la ventilación sión arterial.
adecuada
Nunca será suficiente la insistencia en que el Se realiza el acceso intravenoso. La vena re-
equipo de intervención se asegure siempre del comendada como de primera elección es la

97
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

antecubital. El líquido para iniciar el manejo FIBRILACIÓN VENTRICULAR


es solución salina normal. Se hacen las prepa- Y TAQUICARDIA VENTRICULAR SIN PULSO
raciones para administrar los medicamentos
necesarios. En adultos con colapso cardiorespiratorio in-
dependiente del trauma, la fibrilación es un
Cuando se utiliza la vena para inyectar medi- ritmo que debe ser identificado e intervenido
camentos, siempre se debe administrar un de inmediato. Cada minuto que pasa sin desfi-
bolo posterior de 20 mL de solución salina y brilar incrementa sensiblemente los riesgos de
elevar el brazo del paciente. desenlace fatal.

La secuencia, enlazada con los pasos que se


DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL acaban de ver, es la siguiente:
Y TRATAMIENTO EN CONSECUENCIA
• Contacto con el paciente: no responde.
Ahora se repasan los eventos y se trata de • Pedir apoyo: activación del “Código Azul”.
determinar qué ha ocurrido: • ABCD primario:
A: Respira o no respira: el paciente no res-
• ¿Qué ocasionó el colapso cardiovascular? pira.
• ¿Por qué no hay respuesta? B: Proporcionar dos a cinco ventilaciones
• ¿Qué otras causas debo considerar? a presión positiva.
• ¿He efectuado todo el ABCD primario y C: Determinar si hay pulso: no hay pulso,
secundario u omití algún paso? iniciar RCP.
D: ¿Hay fibrilación ventricular al monito-
rizar?
SECUENCIAS DE INTERVENCIÓN FRENTE
AL PARO CARDIORESPIRATORIO Si se detecta fibrilación ventricular o taquicar-
DE ACUERDO CON EL RITMO DETECTADO dia ventricular sin pulso, se procede con la
desfibrilacion inmediata mediante una secuen-
Se revisan a continuación los ritmos causan- cia de descargas de 200, 300 y 360 joules,
tes de colapso y su manejo se enfoca en for- apenas dejando espacio entre una y otra para
ma específica. corroborar en la pantalla del monitor si revier-
te el ritmo.
Cuando en la pantalla del monitor se detecta
que no existe complejo QRS normal, hay tres Luego de la tercera descarga (360 joules) se
opciones especificas de diagnóstico: verifica si hay pulso. Si no hay pulso, se pro-
ceda con RCP durante un minuto. Si hay pul-
• Fibrilación ventricular. so, se determina el valor de la tensión arterial.
• Taquicardia ventricular (en este caso sin
pulso). ABCD secundario:
• Asistolia.
A: Intubación.
Un cuarto ritmo de colapso en el que puede B: Verificar la buena intubación.
haber complejos QRS normales en el monitor C: Canalización de una vena, monitorización,
es la Actividad eléctrica sin pulso. administración de medicamentos.
D: Diagnóstico diferencial.

98
CAPÍTULO II: REANIMACIÓN CARDIO-CEREBRO-PULMONAR

En los casos en que no hay respuesta, se pro- Anteriormente la situación se consideraba


cede con la intubación y se verifica la buena como una disociación electromecánica debi-
posición del tubo. Se canaliza una vena y se do a la despolarización eléctrica organizada y
inicia la administración de medicamentos. falta de acortamiento sincrónico de las fibras
miocárdicas. Pero desde la década de 1990
El medicamento de elección inicial es la adre- se estableció el término más adecuado: acti-
nalina en dosis de 1 mg por vía venosa. El vidad eléctrica sin pulso (AESP).
intervalo entre dosis de adrenalina es de tres
a cinco minutos. No existe límite para la dosis, Este ritmo se considera como de probable su-
y se puede dar 1 mg IV cada tres minutos pervivencia, ya que detectando la causa con
mientras no revierta el paro. rapidez hay mayor posibilidad de respuesta.

Una vez administradas tres descargas de 200, Las ondas pueden ser lentas y amplias o rá-
300 y 360 joules, y se determina que no hay pidas y estrechas. Se observa mejor pronós-
respuesta, se intuba, se verifica la intubación, tico en los casos con complejos QRS estre-
se canaliza una vena y se inician medicamen- chos y rápidos.
tos, si la fibrilación o la taquicardia ventricular
sin pulso continúan. Entre descarga y descar- Se recomienda la siguiente secuencia de
ga se debe practicar RCP continuamente. manejo:

Cada tres minutos se deben administrar se- • Contacto: la víctima no responde: se acti-
cuencialmente los fármacos indicados. Ade- va el “Código Azul”.
más de la adrenalina, luego de los primeros • Se aplica el ABCD Primario :
tres minutos si persiste la fibrilación ventricular - A : no respira.
o la taquicardia ventricular sin pulso, se apli- - B: proporcionar dos a cinco ventilacio-
ca un medicamento antiarrítmico. La amioda- nes con presión positiva.
rona es el de primera elección, en dosis de - C: Verificar si hay pulso. No hay pulso:
300 mg IV en bolo inicialmente. Si persiste la se inicia RCP.
arritmia luego de unos minutos, puede admi- - D: Hay fibrilación?: No-
nistrarse una segunda dosis de 150 mg IV. La
dosis máxima acumulada en 24 horas debe Se procede con el ABCD secundario:
ser de 2,2 g. A: Intubación.
B: Verificación de buena intubación.
Si solamente se dispone de lidocaína, la do- C: Canalización de vena, monitorización para
sis es de 1 a 1,5 mg por kg cada tres a cinco detectar actividad eléctrica en ausencia de
minutos, con máximo de tres dosis. pulso, que no es FV ni TV. Administrar adre-
nalina 1 mg IV. Administrar una carga de
250 cc de solución salina. Continuar RCP.
ACTIVIDAD ELÉCTRICA Si la actividad eléctrica es lenta, adminis-
SIN PULSO (AESP) trar además atropina 0,5-1 mg IV.
D: Diagnóstico diferencial: tan pronto detecte
La presencia de alguna actividad eléctrica di- la situación inicie proceso para determinar
ferente de la fibrilación ventricular o de la taqui- la causa:
cardia ventricular en ausencia de pulso iden- - Determine si hubo trauma o no. Si hubo
tifica esta arritmia. trauma, proceda de acuerdo con el

99
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ABCDE del Trauma, identificando y tra- • Tensión neumotórax: coloque tubo de tórax.
tando lesiones que amenazan la vida. • Taponamiento cardiaco: ¿toracotomia?
- Si no hubo trauma, determine la edad, ¿pericardiocentesis?
ya que cada grupo de edades tiene mas • Tóxicos: trate de acuerdo con el tóxico. ¿In-
probabilidades de ciertos diagnósticos toxicación con antidepresivos triciclicos?
que otro (un paciente de 17 años, por Considere la aplicación de bicarbonato.
ejemplo, tendrá menos posibilidades de • Tromboembolismo pulmonar: ¿Terapia
infarto que un paciente de 65 años). trombolítica? ¿Trombectomía?
- Desnude al paciente para detectar ha- • Trombosis coronaria: ¿Cateterismo? ¿Re-
llazgos que sugieran la causa (edema vascularizacion si responde a maniobras?
en miembros inferiores sugiere proble-
mas renales y por ende trastorno de hipo Las recomendaciones actuales frente al bicar-
o hipercalemia. Cicatrices recientes su- bonato sugieren lo siguiente:
gieren cirugía reciente, reposo prolon-
gado y embolismo pulmonar. Punciones Clase I (avalado por evidencia definitiva): en
en los brazos sugieren farmacodepen- casos de hipercalemia conocida preexistente.
dencia y tóxicos).
- Interrogue a parientes, lea la historia clí- Clase IIa (aceptable, buena evidencia): Si hay
nica y examine el cuerpo del paciente acidosis conocida preexistente. En sobredosis
en busca de la causa con base en la de antidepresivos triciclicos. En sobredosis de
nemotecnia de las 5H y las 5T: ácido salicílico.
* Hipovolemia, Hipoxia, Hipotermia, Hi-
drogeniones (acidosis), Hipo o Hiperca- Clase IIb (sólo evidencia regular): pacientes
lemia. intubados y ventilados con periodos de paro
* Taponamiento cardiaco. Tensión Neu- prolongados. Al restablecer la circulación lue-
motórax. Tabletas o tóxicos. Tromboem- go de paro prolongado.
bolismo pulmonar. Trombosis coronaria
(Infarto del miocardio) Clase III (puede ser nocivo): acidosis hiper-
cápnica.
Se procede a tratar de acuerdo con la causa.
Como puede verse, hay situaciones de mejor Finalmente, la AESP puede ser abordada uti-
pronóstico que otras: lizando Eco Doppler que puede detectar con-
tracción cardiaca activa y flujo sanguíneo sig-
• Hipovolemia: recupere la volemia enérgi- nificativo. Si hay flujo sanguíneo detectable
camente. por Doppler, el manejo debe ser enérgico:
• Hipotermia: recupere la temperatura volumen, adrenalina, dopamina o combinacio-
normal. nes de las tres. Considerando que en estos
• Hipoxia: detecte y trate el origen del pro- casos el miocardio está sano y lo único que
blema mejorando oxigenación y cuidando se interpone entre la supervivencia y la muer-
enérgicamente la vía aérea. te es una alteración transitoria del sistema de
• Hidrogeniones. Acidosis: considere la apli- conducción cardiaca, debe considerarse la
cación de bicarbonato. opción de marcapaso transcutáneo si se ac-
• Hipercalemia: considere la aplicación de túa precozmente.
bicarbonato.

100
CAPÍTULO II: REANIMACIÓN CARDIO-CEREBRO-PULMONAR

ASISTOLIA la situación luego de veinte minutos, hay que


considerar suspender las maniobras.
Para algunos autores la asistolia no es una
arritmia sino la manifestación sombría de un
corazón agonizante. Los pacientes que mues- LECTURAS RECOMENDADAS
tran asistolia en el monitor tienen tasas de su-
pervivencia muy bajas, apenas de 1% a 2%. 1. American Heart Association. Guidelines for cardio-
pulmonary resuscitation emergency cardiac care.
JAMA 1992; 268: 2212–2302.
La única esperanza de reanimación es la de- 2. Atherton GL, Johnson JC. Ability of paramedics to
tección inmediata o pronta de una causa re- use the combitube in prehospital cardiac arrest.
versible. Ann Emerg Med 1993; 22:1263-1268.
3. Baskett PJF. The Use of the laryngeal mask airway
Al aplicar la secuencia se obtiene: by nurses during cardiopulmonary resuscitation: Re-
• Contacto: NO responde. sults of multicentre trial. Anaesthesia 1994; 49:3-7.
• Active el Código Azul. 4. Bayes de Luna A, Coumel P, Leclercq JF. Ambula-
tory sudden cardiac death: mechanism of produc-
• Aplique ABCD Primario:
tion of fatal arrytmia on the basis of data from 157
A: No respira. cases. Am Heart J 1989; 117:151-159.
B: Proporcione dos a cinco ventilaciones 5. Brenner BE, Ku\auffman J. Reluctance of internists
a presión positiva. and medical nurses to perform mouth-to-mouth
C: Detecte pulso: No hay pulso, inicie RCP. resuscitation. Arch Int Med 1993; 153:1763-1769.
D: No hay fibrilación. 6. Cummins RO, Ornato JP, Thies WH, Pepe PE.
• Aplique el ABCD secundario. Improving survival from sudden cardiac arrest: the
A: Intubación. “chain of survival” concept: a statement for health
professionals from the Advanced Cardiac Life
B: Verificación de buena intubación.
Support SubCommittee and the Emergency
C: Canalización de vena, monitorización y cardiac Arrest Commitee, American Heart
administración de medicamentos. Si en Association. Circulation 1991; 83:1832-1847.
el monitor aparece asistolia, se corrobo- 7. Cummins RO, Hazinski MF. Cardiopulmonary
ra que en realidad no hay pulso; se verifi- resuscitation techniques and instruction: when
ca que los cables de los electrodos no does evidence justify revision? Ann Emerg Med
se han soltado; se cambia de derivación 1999; 34:780-784.
en el monitor para asegurarse que no 8. Davies PRF, Tighe SQ, Greenslade GL. Laryngeal
mask and tracheal tube insertion by unskilled
se trata de un reflejo de fibrilación ven-
personnel. Lancet 1990; 336:977-979.
tricular fina de otra derivación. Se admi- 9. Frass M, Frenzer R, Rauscha F. Ventilation with
nistra adrenalina IV 1mg cada tres a cin- esophageal tracheal combitube in cardiopulmo-
co minutos. nary resuscitation: promptness and effectiveness.
• Se verifica que no haya signos de muerte Chest 1988; 93:781-784.
que contraindican la reanimación. 10. Kern KB, Sanders AB, Raife J, et al. A study of
• Se considera el uso de marcapaso transcu- chest compression rates during cardiopulmonary
táneo siempre y cuando se aplique precoz- resuscitation in humans. Arch Intern Med 1992;
152:145-149.
mente. No es de uso rutinario.
11. Maier GW, Tysons GS Jr, Olsen CO, et al. The
• Se aplica atropina 0,5 mg a 1 mg IV cada physiology of external cardiac massage: high im-
tres a cinco minutos. pulse cardiopulmonary resuscitation. Circulation
1984; 70:86-101.
Si reevaluando cada paso determina que todo 12. Mather C, O Kelly S. The palpation of pulses.
ha sido ejecutado adecuadamente y persiste Anaesthesia 1996; 51:189-191.

101
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

13. Noe M, Weil MH,, Tang W, Turner T, Fukui M. arrest with rapid manual chest compression CPR.
Mechanical ventilation may not be essential for Ann Emerg Med 1990; 19:1-7.
initial cardiopulmonary resuscitation. Chest 1995; 17. Tang W, Weil MH, Sun SJ, Kette D, et al.
108: 821-827. Cardiopulmonary resuscitation by precordial
14. Petito SO, Russel WJ. The prevention of gastric compression but without mechanichal ventilation.
inflation: a neglected benefit of cricoid pressure. Am J Resp Crit Care Med 1994; 150:1709-1713.
Anaesth Intens Care 1998; 16:139-143. 18. Staundinger T, Brugger S, Watschinger B.
15. Reinhart DJ. Laryngeal mask airway (LMA) vs Emergency intubation with the combitube:
endotracheal tube by paramedics and respiratory comparison with the endotracheal tube. Ann Emerg
therapists. Ann Emerg Med 1994; 24:260-63. Med 1993; 22:1573-1575.
16. Sanders AB, Kern KB, Fonken S, Otto CW, Ewy 19. Wencel V, Idris AH, Banner MJ, et al. The com-
GA. The role of bicarbonate and fluid loading in position of gas given by mouth-to-mouth ventilation
improving resuscitation from prolongued cardiac during CPR. Chest 1994; 106:1806-1810.

102
CAPÍTULO III: ACCESO VENOSO CENTRAL

CAPÍTULO III

Acceso venoso central

Sonia Echeverri de Pimiento, Enf, CNSN


Enfermera Jefe, Servicio de Soporte Metabólico y Nutricional
Fundación Santa Fe de Bogotá

José Mario Pimiento, MD


Residente de Cirugía Hospital St. Mary’s
Wasterbury, USA

INTRODUCCIÓN DEFINICIÓN

E l advenimiento de los catéteres venosos


centrales ha jugado un papel significativo
en la medicina moderna. Las intervenciones
La cateterización venosa se define como la
inserción de un catéter biocompatible en el
espacio intravascular, central o periférico, con
médicas y quirúrgicas necesarias en el pacien- el fin de administrar soluciones, medicamen-
te con problemas graves que acude a los ser- tos, nutrición parenteral, medios de contraste
vicios de urgencias y otras intervenciones y realizar pruebas diagnósticas, entre otros.
complejas tales como trasplante de médula
ósea y de órganos, cirugía cardiovascular, ab-
dominal y de trauma, nutrición parenteral, me- INDICACIONES PARA EL USO DE CVC
dicamentos parenterales, monitoría hemodi-
námica y hemodiálisis, entre otras, no serían 1. En pacientes que requieren la administra-
posibles sin el uso de los catéteres venosos ción de soluciones hiperosmolares y gran-
centrales (CVC). A pesar de ser un procedi- des volúmenes de soluciones para reani-
miento de amplia utilización en la actualidad, mación e inotrópicos. También está indica-
la implantación de un CVC implica un riesgo do en pacientes en quienes, por su condi-
significativo de morbilidad y mortalidad para ción clínica, no es posible acceder al espa-
todos los pacientes y en todas las edades. cio intravascular a través de una vena
periférica.
La incidencia de complicaciones está influen- 2. La cateterización intravascular, venosa o
ciada por múltiples factores, principalmente la arterial, está indicada con fines diagnósti-
experiencia del personal médico y de enfer- cos y terapéuticos, para monitorización de
mería y el uso de estrictos protocolos de ma- la presión venosa central, presión pulmo-
nejo. La tasa global de complicaciones se co- nar, presión en cuña del capilar pulmonar,
rrelaciona con la frecuencia de complicacio- cateterismo cardiaco, presión arterial, arte-
nes secundarias a la inserción percutánea, a riografía, angioplastia, escleroterapia, en-
las características y al tipo del catéter, a la tre otros.
técnica de inserción, a su indicación y al ma- 3. Los catéteres permanentes se utilizan prin-
nejo del CVC durante su permanencia. cipalmente para tratamientos a largo pla-

103
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

zo, para la administración de nutrición nos agentes inotrópicos. Debido a su diáme-


parenteral y de quimioterapia, en solucio- tro (3, 4, 5 Fr) y longitud (50-70 cm), no es
nes que por sus características químicas posible administrar grandes volúmenes de lí-
requieren la vía central. quidos en infusión rápida.

Catéteres venosos centrales no tunelizados:


CLASIFICACIÓN DE LOS pueden ser de una, dos, tres o cuatro vías
CATÉTERES INTRAVASCULARES (catéteres multilumen). Estos últimos tienen
gran aceptación debido a que permiten la ad-
Los catéteres intravasculares se pueden cla- ministración simultánea de líquidos, medica-
sificar de diferentes formas. La Tabla 1 resume mentos y la monitorización hemodinámica en
su clasificación según el número de luces, la pacientes críticamente enfermos o con acce-
técnica, la vía de inserción y el tiempo de per- sos venosos difíciles. Sin embargo, varios
manencia del catéter. Según su permanencia, estudios demuestran que la utilización de caté-
los catéteres intravasculares pueden clasifi- teres de tres luces incrementa el riesgo de
carse en dos grandes grupos: temporales o infección debido, posiblemente, a la manipu-
de corto plazo (generalmente insertados me- lación de las conexiones y líneas de infusión.
diante técnica de inserción percutánea) y per- A pesar de que los pacientes con catéteres
manentes o de largo plazo (insertados a tra- multilumen generalmente se encuentran en
vés de técnica quirúrgica). estado más crítico que aquellos que requie-
ren catéteres unilumen, el riesgo de infección
Entre los catéteres temporales o de corto pla- con el uso de catéteres multilumen parece ser
zo se encuentran: independiente de la severidad de la enferme-
dad. En nuestro hospital en un seguimiento
Catéter venoso central de inserción periférica de CVC en pacientes con trauma múltiple se
(PICC) de una o dos vías: es insertado, por lo observó una tasa de infección de 2,09 por
general, a través de las venas basílica y cefá- 1000 días catéter y no se encontró diferencia
lica en la región antecubital. Representa una estadística con otro tipo de patologías.
buena alternativa para administrar soluciones
hiperosmolares e hipertónicas, puesto que Aunque la mayoría de la literatura referenciada
permiten alcanzar la vena cava superior con en la “Guía para la prevención de infección
un mínimo de complicaciones mecánicas e relacionada con catéteres intravasculares” de
infecciosas, a diferencia de los catéteres cen- los Centers for Disease Control and Prevention
trales directos. El espacio antecubital es me- (CDC) sugiere una diferencia en la tasa de
nos colonizado, grasoso y húmedo que el cue- infección tan alta como 2,7% de los yugulares
llo o el tórax; además, aleja el catéter de secre- sobre los subclavios, en el estudio de S. Eche-
ciones nasales y endotraqueales. Estos caté- verri de Pimiento en nuestros servicios se ob-
teres se asocian con una tasa de flebitis de servó una tasa de infección de 1,3% en los
2,2% a 9,7% y de 5-10% de incidencia de yugulares, 2,5% en los subclavias y 2,6% de
trombosis venosa, tasas directamente relacio- los periféricos y femorales.
nadas con el tiempo de permanencia del ca-
téter. Es un procedimiento que con frecuencia Catéter arterial central o de arteria pulmonar:
realizan las enfermeras y su uso se ha gene- llamado también catéter de Swan Ganz, difie-
ralizado en los servicios de urgencias para re de los otros CVC en que es insertado a
administrar soluciones hiperosmolares y algu- través de un catéter de cloruro de polivinilo

104
CAPÍTULO III: ACCESO VENOSO CENTRAL

TABLA 1. CLASIFICACIÓN DE LOS CATÉTERES INTRAVASCULARES

Número de vías Vía de inserción Técnica de inserción Tipo de material Según la permanencia
y tipo de catéter
Unilumen periférico: Yugular interna Percutánea Cloruro de polivinilo Temporal o a corto plazo
Alto flujo: 14-16 G (PVC) Periférico: alto flujo,
normal, bajo flujo
Flujo normal: PICC: 1-2 vías
18-20 Ga Catéter venoso central
no tunelizado
Bajo flujo: 22-24 Ga Catéter de arteria
Unilumen central: pulmonar (Termodilución
16 Ga o de Swan Ganz)
PICC de 3 y 4 Fr Arterial periférico
Multilumen: Yugular externa Seldinger Teflón Permanente o a largo
Bilumen plazo:
Trilumen Tunelizado de 1-2 vías
PICC: 2 vías de 4 y 5 Fr. (tipo Hickman, Broviac)
Implantado
Termodilución o de Subclavia Venodisección Poliuretano Temporal
Swan Ganz
Introductor Femoral Tunelización Vialon
Tunelizado externo Cefálica Central de inserción Silicona Permanente o a largo
Basílica periférica (PICC) plazo
Axilar
Safena
Subcutáneo implantado Implantación subcutánea Permanente o a largo
plazo

(PVC) o de poliuretano de un mayor calibre Entre los catéteres permanentes a largo pla-
(7,5-8,5 Fr). Algunos están recubiertos por una zo están:
capa heparinizada que, al parecer, disminuye
el riesgo de agregación plaquetaria, formación Catéter venoso central externo tunelizado: es
de trombos y posterior colonización por micro- un catéter de silicona o poliuretano, de una o
organismos. Numerosos estudios reportan la dos vías. Tiene un anillo o porción de dacrón
relación existente entre el tiempo de perma- ubicado cerca al sitio de salida del catéter que
nencia del catéter y la Bacteremia Relaciona- lo fija por la formación de tejido fibroso a su
da con Catéter (BRC); por lo tanto, se reco- alrededor. Estudios recientes no encuentran
miendan no dejarlo durante un período ma- diferencia entre éste y los CVC no tunelizados
yor de 3-5 días. (Figura 1). Los más comunes son Hickman,
Quinton, Broviac y Groshong.

105
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Figura 1. Catéter venoso central tunelizado. Figura 2. Catéter venoso central implantable.

Catéter venoso central implantado: es de sili- za a través de la aguja un catéter flexible


cona o poliuretano y posee un reservorio, ge- (PICC o el drum). Las venas de preferencia
neralmente de titanio, con una membrana de son las metacarpianas, mediana, basílica, ce-
silicona que permite múltiples punciones. Se fálica, humeral, axilar, safena y yugulares ex-
implanta en el tejido celular subcutáneo por ternas. En los niños es común el uso de la
medio de un bolsillo que impide su desplaza- temporal y la facial, y en los recién nacidos la
miento y facilita la punción a través de la piel umbilical.
con una aguja especial. Admite una larga per-
manencia y, aunque está asociado con una Seldinger: combina la punción percutánea
tasa baja de BRC, tiende a comportarse como con aguja 18-20 Ga y el paso del catéter a
una prótesis y, por lo tanto, una vez el catéter través de una guía metálica y el uso de un
es colonizado por hongos o S. aureus, presen- dilatador para facilitar el paso y permanencia
ta infecciones polimicrobianas recurrentes y del catéter. Disminuye en forma importante la
bacteremia persistente que requieren su reti- incidencia de complicaciones mecánicas rela-
ro (Figura 2). cionadas con la inserción. Se utiliza para ac-
ceder a grandes vasos como las venas subcla-
vias, yugulares internas y femorales. En pa-
TÉCNICAS O MÉTODOS cientes con alto riesgo de complicaciones, co-
DE INSERCIÓN mo aquellos con hipovolemia, desnutrición u
obesidad, sospecha de malformación de gran-
Percutánea: se realiza venopunción directa des vasos, múltiples punciones anteriores, an-
con aguja metálica o de un material flexible, tecedentes de trombosis, hipercoagulabilidad,
como en la venopunción periférica, y se desli- inmunocompromiso, entre otras, se utiliza,

106
CAPÍTULO III: ACCESO VENOSO CENTRAL

cada vez más, la ayuda de ecografía o fluo- Disección: consiste en el abordaje de una
roscopia. vena a través de la incisión de la piel, del teji-
do celular subcutáneo y la inserción directa
La punción de la vena subclavia fue descrita de un catéter en la vena. Está indicada en si-
por Aubaniac en 1952 y, pese a que es un pro- tuaciones en las cuales ha sido imposible la
cedimiento que se realiza desde hace más de punción percutánea. Su uso está cada vez
50 años, son comunes las complicaciones más restringido, puesto que los reportes indi-
mecánicas debido a que se efectúa a ciegas; can una mayor incidencia de infecciones de-
se recomienda restringir su uso en casos con bido a la manipulación de los tejidos; requiere
indicaciones precisas, apoyarse en el ultraso- personal entrenado, equipo de disección y
nido y que solo sea realizada por expertos. En mayor tiempo de intervención quirúrgica. Se
caso de que la condición clínica del paciente realiza con mayor frecuencia en población in-
permita el abordaje subclavio, se recomienda fantil.
empezar por el lado derecho con el fin de preve-
nir la lesión del conducto torácico que puede En pacientes con trauma múltiple el sitio de
ocurrir al puncionar el lado izquierdo. En pre- elección es la vena safena interna al nivel del
sencia de patología pulmonar, el catéter debe tobillo, realizando la incisión 2 cm por delante
colocarse en el lado de la patología para evitar y por encima del maléolo interno o tibial, se-
una complicación en el pulmón sano y, por con- guido por la vena mediana basílica en la re-
siguiente, un problema pulmonar bilateral. gión antecubital, a 2,5 cm por fuera de la epi-
tróclea humeral en el pliegue de la flexión del
Para la canalización de la yugular se reco- codo.
mienda puncionar el lado derecho, toda vez
que esta tiene un acceso más directo a la vena En los casos urgentes se recomienda disecar
cava superior; se identifica por palpación la la vena que se identifique más fácilmente; sin
arteria carótida, que se encuentra medial y embargo, algunos factores pueden influenciar
posterior a la vena, con el fin de evitar las com- la elección: un ejemplo es la vena yugular ex-
plicaciones resultantes de su punción acciden- terna, fácilmente accesible por ser muy su-
tal. Algunas medidas que ayudan a disminuir perficial, pero su resultado es poco estético.
la frecuencia de complicaciones relacionadas En general las venas superiores, cefálica,
con la cateterización percutánea de estos va- basílica y yugular externa se prefieren cuan-
sos centrales consisten en colocar un rollo de do se pretende medir la presión venosa cen-
tela longitudinal entre las escápulas para ha- tral; las venas de los miembros inferiores se
cer que la cabeza y los hombros caigan hacia emplean cuando las venas antes menciona-
atrás, haciendo más anteriores y accesibles das no son accesibles o cuando la región su-
las venas subclavias; posición de Trendelen- perior del cuerpo está afectada por quema-
burg a 20º-30º, con el fin de ingurgitar y dis- duras. Sin embargo, existe una fuerte relación
tender las venas y girar la cabeza hacia el lado entre la cateterización de las venas de los
contrario a la punción. miembros inferiores y la incidencia de trombo-
flebitis y de fenómenos tromboembólicos.
Después de colocado el catéter es obligatorio
tomar una radiografía del tórax para cercio- Tunelización: es una forma de punción percu-
rarse de que está en la debida posición cen- tánea combinada con venodisección; tiene
tral, que no existen complicaciones y autori- como finalidad alejar el sitio de inserción a la
zar la infusión de soluciones parenterales. vena del sitio de salida del catéter mediante

107
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

la construcción de un túnel en el tejido celular • Obtener el consentimiento informado para


subcutáneo. No se utiliza en situaciones de la realización de este procedimiento invasor.
emergencia y, por lo general, se usa para ad- • Evitar la inserción del CVC en condiciones
ministrar terapia intravenosa a largo plazo, de emergencia, especialmente en los ser-
como quimioterapia, nutrición parenteral am- vicios de urgencias: puede retrasar la reani-
bulatoria y hemodiálisis. Es una técnica que mación aguda.
puede realizarse a ciegas, con guía ecográfica • Verificar que el equipo esté completo.
o bajo visión fluoroscópica. • Realizar el lavado de manos con yodopo-
vidona al 10% o clorhexidina al 2% antes y
después de realizar el procedimiento.
MATERIALES • Usar gorro, mascarilla con visera, bata,
guantes y campos estériles para realizar
• Elementos de protección personal: tapabo- el procedimiento.
cas con visera, guantes, bata estéril y gorro. • Utilizar la técnica de lavado del sitio opera-
• Vial de lidocaína al 1% sin vasoconstrictor. torio para desinfectar el área de inserción
• Aguja 26 Ga. del catéter con yodopovidona al 10%; de-
• Jeringa de 5 ml para infiltrar el anestésico jar actuar la solución yodada durante uno
local. a dos minutos.
• Jeringa de 10 ml para purgar y aspirar el • Preferir las venas yugulares, más que las
catéter. subclavias y femorales, a menos que haya
• Gasas. contraindicación médica.
• Jabón y solución a base de yodo o de • Utilizar preferiblemente catéteres de poliu-
clorhexidina. retano.
• Catéter con su equipo según la marca. • Utilizar catéteres de una o dos luces, a me-
• Seda 4-0. nos que un trilumen sea esencial para el
• Bisturí No. 15. manejo del paciente.
• Tijeras de material. • Cubrir el catéter, inmediatamente después de
• Líquidos endovenosos. la inserción, con una gasa para recoger el
• Equipo de presión venosa central. escaso sangrado producido por la catete-
• Apósito semioclusivo, semipermeable, rización y fijarlo con un apósito transparente,
transparente 10 x 12 (rectangular), 9 x 12 sobre el cual se marca la fecha de inserción.
(ovalado). • Verificar la permeabilidad del catéter; irri-
gar con 10 ml de solución salina normal y
conectar una infusión de solución salina
PROCEDIMIENTO normal a mínimo goteo.
• Registrar en la historia clínica el procedi-
La cateterización venosa central se realiza si- miento realizado.
guiendo las normas previamente establecidas, • Solicitar una radiografía de tórax con el fin
las cuales incluyen el otorgamiento de prerro- de comprobar la ubicación del catéter, ve-
gativas para su ejecución por parte del perso- rificar que no hubo complicaciones relacio-
nal médico y de enfermería, la definición de una nadas con la punción y autorizar la utiliza-
estricta técnica aséptica e instrucciones para ción del mismo.
su manejo y seguimiento por parte del perso- • Cambiar los CVC no tunelizados, que ha-
nal de enfermería. A continuación se enuncian yan sido instaurados en situaciones de
los pasos a seguir en el procedimiento: emergencia o en otra institución.

108
CAPÍTULO III: ACCESO VENOSO CENTRAL

• Emplear la técnica de cambio con guía para • Lavado de manos, nuevamente, con jabón
reemplazar un catéter que no funciona, sólo yodado.
si no hay evidencia de infección en el sitio • Colocación de los guantes.
de inserción. • Inspección y palpación del sitio de inserción
y fijación del catéter en busca de signos
de infección como enrojecimiento, calor,
CURACIÓN DEL induración o secreción.
CATÉTER VENOSO CENTRAL • Limpieza del sitio de inserción, del centro
a la periferia, durante dos minutos con una
• Realizar la primera curación a las 24 horas gasa impregnada en jabón yodado; con
de la inserción y cubrir sólo con el apósito otra gasa impregnada en jabón yodado lim-
transparente. piar el sitio de fijación. Igualmente, limpiar
• Realizar las curaciones posteriores diaria- el catéter desde el sitio de inserción hasta
mente en la Unidad de Cuidado Intensivo el extremo distal del mismo.
y cada 3-5 días en los servicios de hospi- • Cambio de guantes.
talización. • Aplicación de solución yodada en el punto
• Realizar el cambio del apósito en caso de de inserción y por debajo del catéter, utili-
humedad, pliegues, suciedad o que se zando un escobillón.
encuentre levantado. En pacientes, diafo- • Evitar palpar el sitio de inserción después
réticos cambiar el apósito con mayor fre- de la desinfección.
cuencia. • Retirar el exceso de humedad con una ga-
sa estéril con el fin de proteger la piel y
permitir la adecuada adherencia del apósi-
EQUIPO
to semioclusivo.
• Mascarilla y gorro.
• Guantes estériles.
TÉCNICA PARA CUBRIR EL CATÉTER
• Dos paquetes de gasa estéril.
• Jabón y solución yodados.
• Colocación del apósito sobre el sitio de in-
• Apósito semioclusivo, semipermeable,
serción y fijación del catéter; luego pasar
transparente 10x12 (rectangular), 9x12
una gasa seca por encima del apósito para
(ovalado).
facilitar su adhesión. Tener cuidado de de-
• Dos escobillones estériles.
jar un amplio margen de seguridad a los
lados del sitio de inserción del catéter.
PROCEDIMIENTO • En caso de hacer reacción alérgica al apó-
sito transparente se recomienda utilizar
• Colocación del gorro y la mascarilla. esparadrapo tipo Fixomull® y realizar cu-
• Lavado de manos con jabón yodado o ración cada 24-48 horas.
clorhexidina antes de realizar el procedi-
miento.
• Retiro del apósito que se dejó puesto en el MANEJO DE LOS EQUIPOS DE INFUSIÓN Y
momento de la inserción, empezando por SOLUCIONES INTRAVENOSAS
los bordes y luego halando hacia arriba;
tener la precaución de no tocar el sitio de • Cambiar los equipos de venoclisis cada 72
inserción ni desplazar el catéter. horas, al iniciar una nueva mezcla. Cam-

109
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

biar el equipo de infusión cada 24 horas PROCEDIMIENTO:


en caso de administrar sangre o derivados
y nutrición parenteral que contenga lípidos. • Verificación de la orden médica.
• Si el paciente está en la unidad de cuidado • Apagar la bomba de infusión y cerrar la lla-
intensivo y tiene un catéter de dos o más ve del equipo de infusión.
vías, mantener una infusión continua por • Lavado de manos.
cada luz, para evitar la colonización bacte- • Retiro del apósito transparente.
riana. • Colocación de guantes.
• En los pacientes del área de hospitaliza- • Retiro de los puntos de fijación del catéter.
ción, si hay una vía que no se esté utilizan- • Retiro del catéter: se pide al paciente que
do, ésta debe mantenerse permeable me- tome aire y lo retenga, mientras tanto, se
diante la aplicación diaria de una inyección saca el catéter.
de solución heparinizada de 2 ml (50 UI de • Protección de la piel con una gasa seca.
heparina/ml) a través del PRN adapter® • Registro en la hoja de enfermería sobre la
(tapón heparinizado). causa de retiro del catéter.
• No utilizar filtros en el equipo de infusión
como medida de prevención de la infección.
Sin embargo, cuando se administra nutri- COMPLICACIONES
ción parenteral con lípidos se deben utilizar
filtros de 1,2 micras y de 0,22 micras cuan- Se han enumerado más de 38 complicacio-
do se mezclan aminoácidos, carbohidratos, nes, mecánicas o técnicas o infecciosas rela-
calcio y fósforo en cantidades que ponen cionadas con la utilización del CVC. Las prime-
en riesgo de precipitación la solución. ras generalmente se relacionan con la inser-
• Realizar el cambio de acuerdo con el si- ción del catéter y, según su gravedad, se cla-
guiente procedimiento: sifican en mayores o menores. Son complica-
- Lavado de manos con jabón a base de ciones mayores, que ponen en riesgo la vida
yodo o de clorhexidina. del paciente, el neumotórax, el hidrotórax, el
- Purgar el equipo de infusión. Utilizando quilotórax, el hemotórax, la fístula arterioveno-
una gasa estéril humedecida con yodo- sa, el desgarro de la vena, la punción carotí-
povidona o clorhexidina, ocluir la luz del dea. Las infecciosas, como la BRC, también
CVC con el “clamp”, conectar el equipo pueden comprometer la vida de paciente, in-
de infusión al catéter y abrir el “clamp”. crementar el tiempo de hospitalización y au-
Usar esparadrapo para rotular el equi- mentar los costos del manejo. Las BRC incre-
po anotando la fecha en que se realiza mentan la estancia hospitalaria, en promedio
el cambio. 6,5 días en una unidad de cuidado intensivo,
con un costo de $US 29.000 por infección. Un
informe reciente de la National Nosocomial
RETIRO DEL CATÉTER Infection Surveillance (NNIS) mostró que en
el periodo comprendido de 1992 a 1998 la tasa
Una de las principales medidas de prevención de BRC por l.000 días catéter fue de 4,5% en
de las complicaciones infecciosas es el retiro las unidades de cuidado intensivo médico
del catéter tan pronto finaliza su indicación. quirúrgico y de 12,8% en las unidades de aten-
Si se encuentra secreción en el sitio de inser- ción a quemados. En la Fundación Santa Fe
ción, se debe tomar cultivo e informar al mé- de Bogotá la tasa de bacteremia por catéter
dico tratante. es de 3,32% por 1.000 días catéter.

110
CAPÍTULO III: ACCESO VENOSO CENTRAL

La inserción de accesos venosos centrales y El contacto prolongado entre el endotelio vas-


de líneas arteriales implica un riesgo recono- cular y el extremo distal del catéter puede cau-
cido de complicaciones mecánicas o técnicas sar complicaciones como trombosis, trombo-
(neumotórax, trombosis venosa y fístulas arte- embolismo, con la consiguiente oclusión de
riovenosas, entre otras.), e infecciosas loca- la vena, embolismo pulmonar o émbolos para-
les o sistémicas, tales como, tromboflebitis dójicos. Una de las medidas para prevenir esta
séptica, endocarditis, bacteremia e infecciones complicación es, además de escoger un ma-
metastásicas (osteomielitis, endoftalmitis y terial biocompatible, como el poliuretano y pa-
artritis). ra uso a largo plazo la silicona, ubicar el ex-
tremo distal del catéter en la unión entre la
Las complicaciones de los accesos venosos vena cava superior y la aurícula derecha. De-
centrales pueden comprometer diversos as- jar el extremo distal en la cava superior favo-
pectos del procedimiento: rece la trombosis de la vena, mientras que de-
jarlo en la aurícula derecha favorece la forma-
Inserción: en la tabla 2 se presentan las ción de coágulos en la punta y en algunos ca-
complicaciones inherentes a la inserción del sos resulta en perforación del miocardio y ta-
catéter. ponamiento cardiaco.

Pulmonares: complicaciones relacionadas con Neurológicas: se han reportado lesiones neu-


los accesos subclavio y yugular interno. El más rológicas, al parecer, por lesión con la aguja
común es el neumotórax. En pacientes con durante el procedimiento, especialmente la
ventilación mecánica, se debe vigilar estrecha- lesión del plexo braquial y del nervio frénico.
mente su patrón respiratorio debido a la posi-
bilidad de neumotórax a tensión, lo cual requie- Abdominales: la punción femoral general-
re manejo inmediato de descompresión. El pa- mente se asocia con menos complicaciones,
so de soluciones a través de un catéter que pero la literatura reporta complicaciones como
haya lesionado la cavidad pleural puede cau- laceración intestinal, peritonitis, absceso del
sar hidrotórax, la lesión del conducto torácico psoas y punción de vejiga, entre otros.
puede producir quilotórax y la de estructuras
vasculares hemotórax. La gravedad de una de Infecciosas. El CDC de Atlanta define las po-
estas complicaciones puede significar una in- sibles complicaciones infecciosas de la catete-
tervención quirúrgica de urgencia. rización venosa central de la siguiente manera:

Vasculares: la laceración de estructuras • Colonización del catéter: crecimiento de


vasculares puede asociarse con hematomas, >15 unidades formadoras de colonias
especialmente en pacientes con alteraciones (UFC) en cultivo semicuantitativo o >10 3
de la coagulación. El embolismo aéreo es una UFC en cultivo cuantitativo de un segmen-
complicación no muy frecuente pero que pue- to proximal o distal del catéter en ausencia
de conducir a arritmias, infarto de miocardio, de síntomas clínicos.
endocarditis, embolismo pulmonar y cerebral • Infección del sitio de salida del catéter: eri-
con sus manifestaciones clínicas y secuelas. tema, induración, calor o secreción puru-
El manejo inicial de esta complicación con- lenta hasta 2 cm del sitio de salida del ca-
siste en poner el paciente en decúbito lateral téter.
izquierdo para la reubicación del émbolo y la • Infección del bolsillo del catéter implanta-
disminución de los síntomas. do: eritema y necrosis de la piel sobre el

111
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 2. COMPLICACIONES MECÁNICAS O TÉCNICAS MÁS FRECUENTES Y FACTORES DE RIESGO. MODIFICADO DE


PARSA MH Y SHOEMAKER WC. ACCESO INTRAVASCULAR Y MANTENIMIENTO PROLONGADO DE CATÉTERES. EN:
TRATADO DE MEDICINA CRÍTICA Y TERAPIA INTENSIVA. EDITADO POR WC SHOEMAKER, SM AYRES, A GRENVICK, ET
AL. EDITORIAL MÉDICA PANAMERICANA. BUENOS AIRES, 1996.

Complicación Factores de riesgo


Punción arterial accidental Hipertensión
Coagulopatía
Agujas largas y de gran calibre
Falta de experiencia del operador
Arterias tortuosas o aneurismáticas
Punción accidental de los Hipertensión portal
conductos linfáticos Abuso de drogas intravenosas (la trombosis venosa aumenta el flujo linfático)
Punción accidental del vértice Ampollas o bulas apicales
pulmonar Emaciación, edad avanzada
Enfermedades pulmonares (EPOC, TBC)
Agujas largas (en relación con el espesor de los tejidos blandos entre la piel y el
vértice pulmonar)
Antecedentes de neumotórax iatrogénico secundario a intentos de cateterización
venosa central
Ventilación mecánica con PEEP elevada y un volumen corriente alto
Formación de coágulos(trombosis) Malposición y retracción del CVC
Estados de hipercoagulabilidad- Infección del catéter
Catéter de material trombogénico- Infusiones de sustancias altamente
hiperosmolares- Catéteres permanentes durante un tiempo prolongado
Obstrucción del CVC Acodamiento del CVC o del equipo de infusión
Reflujo de sangre hacia el interior del CVC y el equipo de infusión
Desalojo accidental del CVC Pacientes agitados y no colaboradores
Falta de experiencia en la protección de los CVC por parte del personal encar-
gado de su manejo (médicos, personal de enfermería y servicio de apoyo)
Gravedad de las secuelas de las Demoras en el diagnóstico
complicaciones Tratamiento inapropiado y/o inadecuado
Embolia gaseosa Hipovolemia y presión venosa baja- Esfuerzos inspiratorios y taquipnea- Postu-
ra inapropiada del paciente - Desconexión accidental entre el catéter y el equi-
po de infusión

reservorio o exudado purulento del bolsillo cuantitativo del segmento del CVC y en
que contiene el reservorio. sangre (preferiblemente de venas peri-
• Infección del túnel: eritema, calor, indura- féricas) de un paciente con sintomatología
ción del tejido que cubre el catéter y > de 2 clínica y ninguna otra fuente de infección.
cm en la piel alrededor del sitio de salida. En ausencia de confirmación por labora-
• Bacteriemia o infección sistémica relacio- torio, la desaparición de síntomas de in-
nada con catéter (BRC): aislamiento del fección después de la remoción del CVC
mismo gérmen (especies idénticas, anti- se puede considerar evidencia indirecta de
biograma) en cultivos semicuantitativo o BRC.

112
CAPÍTULO III: ACCESO VENOSO CENTRAL

• Bacteremia relacionada con infusiones: ais- MANEJO


lamiento del mismo gérmen en la infusión
y en hemocultivos tomados de venas peri- Vigilancia de la infección relacionada con
féricas diferentes al sitio de la infusión, sin catéter.
otra fuente aparente de infección.
• Establecer un programa de vigilancia y
Se estima que 90% de los catéteres venosos control de las infecciones relacionadas con
centrales son los responsables de la bactere- el catéter para determinar la tasa y la ten-
mia relacionada con catéter (BRC). Los fac- dencia de infección propia de la institución.
tores que contribuyen a la contaminación del • Expresar las cifras de bacteremia relaciona-
catéter venoso central son, entre otros: da con catéter en infección por 1.000 días
catéter con el objetivo de facilitar su com-
• Técnica y sitio de la inserción. paración con la tendencia internacional.
• Características del catéter: material y nú- • Palpar diariamente el sitio de inserción, a
mero de vías o luces. través del apósito, en busca de induración
• Características del paciente. o absceso.
• La diseminación hematógena en pacientes • Inspeccionar el catéter si el paciente ha de-
que tienen focos sépticos. sarrollado enrojecimiento del sitio de inser-
• El manejo inadecuado de las líneas y del ción, fiebre sin fuente obvia o aparente de
sitio de inserción. infección local o sistémica.
• La contaminación por vecindad. • Registrar la fecha de inserción del catéter
• La administración de soluciones endoveno- en el formato correspondiente y el nombre
sas contaminadas. y fecha de la persona que realiza la cura-
• La falta de una guía o “protocolo” de ma- ción del catéter sobre el apósito que lo cubre.
nejo de catéteres intravasculares. • No realizar cultivos de catéteres y de las
conexiones en forma rutinaria.

DIAGNÓSTICO DE LAS COMPLICACIONES


SOSPECHA DE INFECCIÓN
Las complicaciones mecánicas o técnicas se
pueden diagnosticar mediante una radiogra- • Si hay sospecha de infección relacionada
fía de tórax, si el CVC es insertado en el área con el catéter (sin signos locales de infec-
superior, o una radiografía de abdomen, en el ción) cambiar el CVC con guía y enviar el
caso de un CVC colocado en miembros infe- extremo distal a cultivo. Si éste es positi-
riores (safena o femoral) y del examen físico vo, cambiar el sitio de inserción del CVC.
y la observación directa del paciente. Según • Si se sospecha bacteremia secundaria al
el caso se pueden utilizar otras ayudas de imá- catéter, tomar tres hemocultivos a través
genes diagnósticas. de venas periféricas. Asimismo, cultivar el
segmento distal del catéter. Los hemocul-
Las complicaciones infecciosas se pueden tivos a través del CVC sólo se toman en
diagnosticar mediante cultivos del catéter o caso de que el infectólogo lo ordene.
de la secreción en el sitio de inserción, del • Antes de cultivar el CVC, se debe realizar
examen físico del paciente y de la observa- una limpieza de éste con gasa estéril hu-
ción directa del sitio de inserción del catéter. medecida con jabón yodado o clorhexidina
y luego con solución yodada o clorhexidina.

113
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Realizar el seguimiento microbiológico del Bogotá. De seguimiento asistencial a indicador de


catéter, correlacionarlo con los hemoculti- gestión. Medicina 2002; 24:169-187.
vos y clasificar la complicación infecciosa. 7. Kessel DO, Taylor EJ, Robertson L, et al. Routine
chest radiography following imaging-guided place-
ment of tunneled central lines: a waste of time,
money, and radiation. Nutr Clin Pract 2002; 17:105-
109.
LECTURAS RECOMENDADAS 8. Orr ME. The peripherally inserted central catheter:
what are the current indications for its use? Nutr
1. Andrews JC. Thrombotic complications of chronic Clin Pract 2002; 17:99-104.
central venous catheters. ASPEN. Program Sylla- 9. Parsa MH, Shoemaker WC. Acceso intravascular
y mantenimiento prolongado de catéteres. En: Tra-
bus. Nutrition Week 2003; 1:4-5.
tado de Medicina Crítica y Terapia Intensiva. Edi-
2. Centers for Disease Control and Prevention. Gui-
tado por WC Shoemaker, SM Ayres, A Grenvick,
delines for the prevention of intravascular catheter-
et al. Editorial Médica Panamericana. Buenos Ai-
related infections. MMWR 2002; 5:1-29.
res, 1996.
3. Comité de Trauma. Manual del Curso Avanzado 10. Pimiento S, Escallón J, Celis E, et al. Accesos
de Soporte Vital en Trauma (ATLS). Sexta edición. venosos centrales en pacientes con trauma múlti-
Colegio Americano de Cirujanos. Chicago, 1997. ple. Panam J Trauma 1995; 6:26-33.
4. Droner SC, Younger JG. Central venous catheteri- 11. Ryder M. Device selection: a critical strategy in
zation and central venous pressure monitoring. In the reduction of catheter-related complications.
Roberts: Clinical: Clinical Procedures in Emergen- Nutrition 1996; 12:143-145.
cy Medicine. WB Saunders Company. Philadel- 12. Ryder M. The future of vascular access: will the
phia, 1998. benefits be worth the risk? (Editorial) Nutr Clin
5. Echavarría HR. Guía de manejo de urgencias. Pract 1999; 14:165-169.
Catéteres venosos centrales. Ministerio de Salud- 13. Vanek VW. The ins and outs of venous access.
FEPAFEM. Bogotá, 1996. Part 1. Nutr Clin Pract 2002; 17:85-97.
6. Echeverri de Pimiento S. Control de la cateteriza- 14. Vanek VW. The ins and outs of venous access.
ción venosa central en la Fundación Santa Fe de Part 2. Nutr Clin Pract 2002; 17:142-155.

114
CAPÍTULO IV: GUÍA PARA DRENAJE Y SUCCIÓN PLEURAL

CAPÍTULO IV

Guía para drenaje y succión pleural

José Félix Patiño R. MD, FACS (Hon)


Oficina de Recursos Educacionales – FEPAFEM
Departamento de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá.

DRENAJE DEL TÓRAX

E l drenaje pleural se hace mediante tubos


que se colocan en la cavidad torácica al
final de una intervención operatoria, o luego
a un nivel superior al de la contraincisión de
la piel; la penetración al tórax debe hacerse
inmediatamente sobre el borde superior de la
de una toracentesis o una toracostomía cerra- costilla, con el fin de evitar laceración o trau-
da (toracostomía por tubo de tórax) para eva- matismo del paquete vasculonervioso inter-
cuar un neumotórax o un hemotórax de ori- costal, que está ubicado a lo largo del borde
gen traumático. inferior. El tubo basal debe quedar por lo me-
nos a nivel de la línea axilar media para evitar
La guía e indicaciones para la toracentesis y que el paciente lo obstruya o maltrate al recos-
la toracostomía cerrada (colocación percu- tarse o al adoptar la posición de decúbito
tánea de un tubo de tórax) aparecen descri- dorsal.
tas en una publicación reciente (Patiño,1994).
El tubo apical, o superior, está destinado a dre-
El drenaje postoperatorio del tórax está indica- nar aire, principalmente, y se coloca en posi-
do en determinadas condiciones, y se hace de ción anterior a nivel del segundo o tercer es-
acuerdo con las siguientes recomendaciones: pacio intercostal, lateral a la línea mediocla-
vicular, o especialmente en mujeres, en posi-
ción más lateral e inferior, donde la cicatriz
RESECCIÓN PARCIAL DEL PULMÓN sea menos visible.

Se recomienda colocar un tubo basal (inferior) Se recomienda que ambos tubos, pero preferi-
calibre 30-32 F y un tubo apical (superior) ca- blemente el tubo apical, sean fijados a la pleu-
libre 28-30 F; los tubos deben tener múltiples ra parietal en el interior de la cúpula del tórax
fenestraciones, la última de las cuales debe mediante una sutura de material absorbible.
quedar ubicada a una profundidad no menor
de 5 cm de la pared interna del tórax.
OPERACIÓN A TRAVÉS
El tubo basal, o inferior, debe ser colocado a DE ESTERNOTOMÍA
dos o tres espacios intercostales por debajo (MEDIANA O TRANSVERSA)
de la incisión de la toracotomía, a través de
una contraincisión y tracto oblicuo dirigido en Se colocan uno o dos tubos que emergen por
sentido cefálico, que penetre la pared torácica sendas contraincisiones en la piel del epigas-

115
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

trio, a unos 4 o 5 cm por debajo y laterales a En casos de contaminación copiosa del tórax
la incisión. o en aquellos en los cuales la producción intra-
pleural de líquido sea predeciblemente muy
Si los espacios pleurales han sido abiertos, alta, se prefiere dejar un tubo conectado a dre-
se colocan tubos intercostales adicionales pa- naje bajo sello de agua (Figura 1), pero, por
ra drenaje, durante el cierre de la esternoto- supuesto, nunca a succión. Así se drenan la
mía, de la cavidad pleural; éstos son retirados sangre y el líquido, que pueden ser un exce-
en cuanto el esternón haya sido cerrado. lente medio de cultivo. El drenaje (sin succión)
se puede mantener durante dos a siete días,
El tubo de drenaje colocado en el espacio re- según la evolución del paciente.
troesternal debe ser tratado con drenaje de
sello bajo agua o con succión, por su real o
eventual comunicación con las cavidades
pleurales.

NEUMONECTOMÍA
Excepto bajo condiciones especiales, la cavi-
dad pleural no debe ser drenada después de
una neumonectomía.

Al final de la resección puede colocarse un


catéter o una simple sonda de Nelaton, que
puede salir por el extremo posterior (o anterior)
de la herida. Cuando esta última esté total-
mente cerrada y el paciente haya sido cam- Figura 1. Sello de agua con un frasco. El frasco con-
tiene un volumen determinado de agua estéril, que
biado de la posición de decúbito lateral a de- es registrado y marcado sobre el mismo frasco. La
cúbito dorsal, con lo cual el mediastino se re- punta del tubo que conecta con el tubo de tórax
ubica en su posición normal, el catéter, abier- del paciente debe ser colocada a 2 cm bajo el ni-
to a la presión atmosférica ambiente, es reti- vel del agua. (Tomado de Trib Médica 89:165, 1994).
rado. Igual efecto puede lograrse sin colocar
este catéter o sonda, puncionando el segundo
o tercer espacio intercostal sobre la línea me- En los casos rutinarios postneumonectomía
dioclavicular, cuando el paciente ya esté en no contaminados el tubo intrapleural no debe
decúbito dorsal, con una aguja calibre 14 o ser dejado por más de una o dos horas, pues-
16. Lo anterior para lograr el equilibrio entre to que éste es una formidable fuente de conta-
la presión intrapleural y la presión atmosféri- minación y produce al paciente incomodidad
ca ambiente; una jeringa de vidrio de 50 ml, y limitación de movimientos, además de ser
lubricada con agua o con solución salina con una carga adicional de trabajo y vigilancia para
el objeto de que el émbolo se mueva fácilmen- la enfermera. Se corre el riesgo de que el pa-
te, oscilará con la inspiración y la espiración; ciente, al toser violentamente, pueda evacuar
ahora se aspira suavemente para dejar una suficiente aire de la cavidad pleural que ge-
leve presión negativa (-4 a-10 cm H 2O). nera presión negativa y desvíe peligrosamente
el mediastino hacia la cavidad pleural vacía.

116
CAPÍTULO IV: GUÍA PARA DRENAJE Y SUCCIÓN PLEURAL

En casos de neumonectomía se recomienda


tomar una radiografía del tórax a la llegada
del paciente a la unidad de cuidado postope-
ratorio inmediato, con el fin de determinar la
correcta posición del mediastino.

SISTEMAS DE DRENAJE
Y SUCCIÓN PLEURAL
Las figuras 1 a 4 ilustran el ensamblaje y la
disposición del sistema de frascos reeste- Figura 2. Sello de agua con dos frascos. El primer
rilizables que comúnmente se utiliza para el frasco recibe el drenaje (no se mezcla con el agua
drenaje pleural mediante: del sistema) y sirve de protección si el sistema es
levantado por encima del nivel del tórax. El segun-
do frasco es el sello de agua. (Tomado de Trib Mé-
a. sello de agua con un frasco (Figura 1) o dica 89:165, 1994).
dos frascos (Figura 2), o
b. succión mediante la conexión al sistema
central de pared o a un succionador portá-
til, utilizando un sistema de dos frascos (Fi-
gura 3) o de tres frascos (Figura 4).

La alternativa al sistema de frascos reesterili-


zables, preferible pero costosa, es la unidad
de succión torácica de plástico desechable (ti-
po Pleuravac, Pleura-Guard, etc) que se ilus-
tra en la Figura 5. Figura 3. Sistema de succión con dos frascos. El pri-
mer frasco es el recipiente de recolección y es tam-
En el sistema de frascos todos los tubos y reci- bién sello de agua. El segundo determina la mag-
pientes deben estar debidamente esteriliza- nitud de la succión según la profundidad del tubo
bajo agua (usualmente 15-20 cm). (Tomado de Trib
dos, y los frascos deben permanecer en sus Médica 89:165, 1994).
canastillas de ruedas, para su fácil manejo al
pie de la cama o durante el transporte del pa-
ciente.

El sistema debe ser ensamblado con técnica


aséptica y cambiado cada 24 horas.

DRENAJE BAJO AGUA (SELLO DE AGUA,


“TRAMPA DE AGUA”) SIN SUCCIÓN Figura 4. Sistema de succión con tres frascos. El pri-
mer frasco es el recipiente de recolección. El se-
gundo es un sello de agua. El tercero determina la
Es el sistema más sencillo; puede ser instala-
magnitud de la succión según la profundidad del
do en cualquier lugar, con los frascos al lado tubo bajo agua, usualmente 15-20 cm. (Tomado
de la cama del paciente, siempre ubicados en de Trib Médica 89:165, 1994).

117
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

presión intrapleural de -20 cm de agua y el


tubo está a 2 cm bajo el nivel del agua, la
inspiración del paciente hará que el agua
suba 1 cm por el tubo de seguridad, que-
dando todavía 1 cm del tubo por debajo
del nivel del agua. Entre mayor sea su pro-
fundidad bajo el nivel del agua, mayor será
la presión intrapleural que debe ser gene-
rada para evacuar el aire o líquido. No debe
quedar demasiado cerca del nivel del agua,
pues se correría peligro de que la evapora-
ción haga descender el nivel y se pierda el
sello de agua, y tampoco demasiado pro-
fundo por cuanto esto anularía su capaci-
dad de drenar. El frasco debe ser rotulado,
indicando la cantidad de agua estéril colo-
cada, la fecha, hora e iniciales de quien ins-
taló el sistema.
El líquido drenado se mezcla con el agua
del sistema, lo cual impide su inspección
Figura 5. Unidad desechable de succión torácica. adecuada y aumenta el nivel del agua en
Funciona en forma análoga al sistema de tres fras- el frasco.
cos. La primera cámara es similar al primer frasco y
b. Dos frascos (Figura 2). Con este sistema
recibe el material drenado; la segunda, en forma
de U, equivale al segundo frasco de sello de agua; se evita el peligro que existe con el sistema
la tercera regula la presión, como lo hace el tercer de un solo frasco, el ingreso potencial de
frasco. El burbujeo en la tercera cámara indica que agua al tórax si el frasco de sello de agua
el nivel de succión es máximo, puesto que ya intro-
es levantado a un nivel superior al del tó-
duce aire desde el exterior, igual que en el tercer
frasco, sólo que la magnitud de la succión está rax del paciente. Se coloca un primer fras-
dada por la cantidad de agua (altura del nivel de co, el receptáculo o frasco recolector (oja-
agua) y no por la profundidad del tubo bajo el ni- lá con marcación volumétrica), entre el tubo
vel del agua en el tercer frasco.
de tórax y el sello de agua; esto permite la
evacuación del líquido de drenaje antes de
su ingreso al segundo frasco, y también
evita que se incremente el nivel del líquido
su carro móvil a un nivel inferior (sobre el piso) en el sello de agua (segundo frasco).
y debidamente asegurados para evitar voltear- c. Dos frascos (Figura 3). El primer frasco,
los accidentalmente. Pueden utilizarse uno o que es el receptáculo o frasco recolector,
dos frascos (Figuras 1 y 2), pero de preferen- constituye una válvula de seguridad, con
cia dos, para mayor seguridad. sello de agua. El segundo regula la magni-
tud de la succión, con base en la profundi-
a. Un frasco (Figura 1). La extremidad del dad del tubo que está bajo el agua, usual-
tubo de seguridad (sello de agua) debe per- mente a 15-20 cm por debajo del nivel. El
manecer siempre a 2 cm bajo el nivel del nivel del agua debe ser revisado cada 6
agua. El diámetro de este tubo debe ser 1/ horas, pues éste desciende como conse-
20 del diámetro del frasco; si se tiene una cuencia de la evaporación. Por tanto, el ma-

118
CAPÍTULO IV: GUÍA PARA DRENAJE Y SUCCIÓN PLEURAL

nómetro del succionador de pared no es el menta la succión de la pared (o del succio-


que determina la presión negativa (succión) nador portátil) hasta lograr un burbujeo
en el frasco; el manómetro de pared debe suave y constante en las dos fases de la
ser mantenido en succión continua, a una respiración.
presión suficiente para asegurar el burbujeo Para el transporte del paciente debe des-
en el segundo frasco durante las dos fases conectarse el tubo que conecta el segun-
de la respiración. El tubo bajo agua del do con el tercer frasco, lo mismo que la
segundo frasco, usualmente con su extre- succión central, quedando el paciente co-
mo a 15-20 cm bajo el nivel del agua, re- nectado al sistema de sello de agua.
gula la succión y también actúa como vál- e. Unidad desechable de drenaje torácico
vula de seguridad: al aumentarse la suc- (Figura 5) Comercialmente se encuentran
ción en el sistema, por cualquier circunstan- disponibles unidades estériles desechables
cia, permite que el exceso de presión nega- de plástico (tipo Pleuravac, Pleura-Guard,
tiva “desfogue”, lo cual se manifiesta por etc.) específicamente construidas para suc-
un burbujeo intenso pero con mantenimien- ción torácica. Son costosas pero extrema-
to de la misma magnitud de succión en el damente prácticas y evitan las confusiones
sistema. Este sistema se utiliza preferen- y la complejidad relativa del proceso de
cialmente para drenaje de aire de la cavi- esterilización y conexión implícitos con los
dad pleural. sistemas de frascos.
d. Tres frascos (Figura 4). El más complejo,
pero al mismo tiempo el que ofrece mayor La unidad desechable equivale al sistema de
seguridad, es el sistema de preferencia y tres frascos y tiene tres cámaras: la primera,
de uso rutinario en la mayoría de los pacien- que se conecta al tubo de tórax, es análoga al
tes que requieran succión torácica; combi- primer frasco, sirve como reservorio de reco-
na las ventajas de los anteriores. El primer lección -por lo cual está calibrada en incremen-
frasco, receptáculo o frasco de recolección, tos graduales- y tiene capacidad hasta de
se mantiene libre de agua, lo cual permite 2500 ml. La segunda cámara es el sello de
definir el tipo y volumen del líquido drenado; agua, análoga al segundo frasco; controla la
es protegido por el segundo frasco, que es dirección del flujo de la succión entre el pacien-
el de sello de agua. La magnitud de la pre- te y la cámara de recolección, pero no en el
sión negativa de nuevo está determinada sentido contrario. La tercera cámara es la re-
por la profundidad del tubo bajo agua en el guladora de la magnitud de la succión y corres-
tercer frasco (usualmente 15-20 cm) y no ponde al tercer frasco, pero mientras en el sis-
por el nivel de presión negativa que marca tema de tres frascos la succión máxima es
el manómetro de la pared. Naturalmente, determinada por la profundidad bajo agua del
el manómetro debe ser mantenido a una tubo (15-20 cm es lo usual), cuyo extremo su-
presión mayor que el nivel de profundidad perior es abierto al ambiente, en la unidad de
del tubo para lograr succión efectiva en el plástico está determinada por la altura hasta
tercer frasco, lo cual se manifiesta por bur- la cual se llena con agua la tercera cámara, y
bujeo permanente durante las dos fases de puede llegar hasta 25 cm. Esto quiere decir
la respiración. que existe una limitación, hasta 25 cm de pre-
Así ensamblado el sistema, para obtener sión, con la unidad, limitación que no se pro-
la magnitud deseada de succión, por ejem- duce con el sistema de frascos, en el cual el
plo 15 cm, se coloca la punta del tubo a 15 volumen de agua puede ser aumentado para
cm por debajo del nivel de agua y se incre- alcanzar presiones mayores de 25 cm H 2O.

119
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Para el transporte del paciente basta desco- herméticamente, con gasas estériles y es-
nectar el equipo de la succión central y éste paradrapo debidamente colocados, la en-
queda automáticamente en la modalidad de trada del tubo a la piel.
sello de agua, en virtud de la válvula de una f. El tubo de conexión entre el tubo intrapleu-
sola vía presente en la unidad. ral y el sistema debe permanecer al mis-
mo o inferior nivel del tórax del paciente,
Los anteriores métodos y sistemas aparecen con el fin de no aumentar la resistencia del
bien descritos e ilustrados en los artículos que sistema (por ejemplo, evitar pasarlo sobre
se enumeran al final en las referencias biblio- la baranda levantada de la cama).
gráficas. g. La oscilación del líquido de drenaje en el
interior del tubo permite verificar la funcio-
nalidad del sistema; la oscilación es nor-
PRECAUCIONES malmente de 5 cm; una oscilación mayor
puede ser indicativa de fístula broncopleu-
a. Todos los sistemas deben ser provistos en ral, y la ausencia de oscilación generalmen-
paquetes estériles, con sus respectivos te indica obstrucción del tubo.
tubos y conectores de tamaños, calibres h. La movilización o transporte del paciente a
y longitudes precisos y adecuados. un lugar distante debe hacerse colocando
b. Permanentemente debe estar disponible, el sistema a “trampa de agua”, nunca con
con el sistema de succión torácica, un equi- el sistema cerrado, por el peligro de pro-
po de “clampeo”, o sea un par de pinzas ducir neumotórax a tensión.
especiales de tipo Rochester que permi- i. Un sistema de succión pleural debe estar
tan la oclusión del sistema, y unas pinzas permanentemente bajo el cuidado y la su-
de tipo “roller” para su “ordeño” externo. pervisión de personal de enfermería idó-
c. Nunca debe evacuarse el agua del frasco neo, con conocimientos y experiencia. El
de sello de agua, y tampoco elevar el sis- descuido puede dar lugar a accidentes muy
tema por encima del nivel del tórax del pa- graves con potenciales consecuencias le-
ciente. tales.
d. Si hay burbujeo por escape de aire dentro
del tórax del paciente (neumotórax, fístula
broncopleural) nunca debe ocluirse el sis-
LECTURAS RECOMENDADAS
tema, pues el neumotórax aumentaría y
se convertiría en un neumotórax a ten- 1. Adrales G, Huynh T, Broering B, et al. A thora-
sión. Debe recordarse que si se presenta costomy tube guideline improves management
una falla eléctrica o de succión, en una de efficiency in trauma patients. J Trauma. 2002;
las tres botellas del sistema existe el sello 52:210-4.
de agua, el cual sigue operando aun sin 2. Aleman C, Alegre J, Armadans L, et al. The value
succión. ¡Pinzar el sistema en estas con- of chest roentgenography in the diagnosis of
diciones esta CONTRAINDICADO! pneumothorax after thoracentesis. Am J Med 1999;
107:340-3.
e. La fijación del tubo de tórax a la piel del
3. Bell RL, Ovadia P, Abdullah F, et al. Chest tube
paciente debe hacerse con sumo cuidado, removal: end-inspiration or end-expiration? J Trau-
tomando todas las precauciones para evi- ma 2001; 50:674-7.
tar el grave accidente que significa su sali- 4. Diaz G, Castro DJ, Perez-Rodriguez E. Factors
da accidental. Es preferible utilizar espa- contributing to pneumothorax after thoracentesis.
radrapo ancho de tela, cuidando de sellar Chest 2000; 117:608-9.

120
CAPÍTULO IV: GUÍA PARA DRENAJE Y SUCCIÓN PLEURAL

5. Fartoukh M, Azoulay E, Galliot R, et al. Clinically 9. Petersen S, Freitag M, Albert W, et al. Ultrasound-
documented pleural effusions in medical ICU guided thoracentesis in surgical intensive care
patients: how Useful is routine thoracentesis? patients. Intensive Care Med. 1999;25:1029-7.
Chest 2002;121:178-84. 10. Petersen WG, Zimmerman R. Limited utility of
6. Martino K, Merrit S, Boyakye K, et al. Prospective chest radiograph after thoracentesis. Chest. 2000;
randomized trial of thoracostomy removal 117:1038-42.
11. Rozycki GS, Pennington SD, Feliciano DV.
algorithms. J Trauma 1999; 46:369-71.
Surgeon-performed ultrasound in the critical care
7. Pacanowski JP, Waack ML, Daley BJ, et al. Is rou-
setting: its use as an extension of the physical
tine roentgenography needed after closed tube examination to detect pleural effusion. J Trauma
thoracostomy removal? J Trauma 2000; 2001; 50:636-42.
48:684-8. 12. Villena V, Lopez-Encuentra A, Pozo F, et al. Mea-
8. Palesty JA, McKelvey AA, Dudrick SJ. The efficacy surement of pleural pressure during therapeutic
of X-rays after chest tube removal. Am J Surg thoracentesis. Am J Respir Crit Care Med 2000;
2000;179:13-6. 162:1534-8.

121
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Guía para la práctica de toracentesis y de


toracostomia cerrada (inserción de tubo de tórax)

José Félix Patiño R. MD, FACS (Hon)


Oficina de Recursos Educacionales – FEPAFEM
Departamento de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá.

E l acceso a la cavidad pleural para el dre-


naje y la evacuación de aire, líquido o
sangre es un procedimiento de práctica fre-
técnica por personal idóneo, por cuanto de-
bido a su naturaleza invasiva conllevan un im-
portante potencial de complicaciones graves.
cuente en el medio hospitalario, en condicio-
nes de emergencia o como acto electivo y pro- Hasta ahora el acceso a la cavidad pleural se
gramado. ha hecho en forma “ciega”, introduciendo el
catéter o el tubo a través de una punción o de
La toracentesis (pleurocentesis o toracocen- una pequeña incisión en la pared del tórax.
tesis) se refiere a la inserción de una aguja, Es ya evidente que en un número creciente
trócar o catéter en la cavidad pleural con el fin de pacientes se hará por la técnica toracos-
de extraer aire o líquido de la misma. cópica, bajo visión directa, lo cual, además
de significar mayor seguridad, permite la ins-
La toracostomía se refiere al ingreso a la ca- pección amplificada, la toma de citología ti-
vidad pleural a través de un espacio inters- sular o de líquido, la biopsia y, en algunos ca-
costal (toracostomía cerrada) o mediante la sos, la ejecución de procedimientos terapéu-
resección de un segmento de costilla (tora- ticos. La colocación de un tubo de tórax con
costomía abierta). ayuda toracoscópica se perfila como un pro-
cedimiento de creciente utilización en la
La toracostomía cerrada o toracostomía de práctica clínica diaria.
tubo se refiere a la inserción percutánea de
un tubo, y generalmente se la conoce como El propósito del procedimiento de acceso a la
la “inserción o colocación de un tubo de cavidad pleural debe ser claro y la naturaleza
tórax”. del trastorno que se pretende corregir debe
estar bien definida. Esto se logra mediante la
Tanto la toracentesis como la toracostomía apreciación clínica en ciertas condiciones de
cerrada son procedimientos sencillos, que se emergencia extrema (un neumotórax a ten-
ejecutan como rutina diaria en los servicios sión, por ejemplo, en que el drenaje inmediato
de un hospital general; en ciertas condiciones significa la vida misma del paciente) o por imá-
clínicas pueden ser salvadores de la vida de genes diagnósticas. Aunque la radiografía sim-
un paciente. Ambos procedimientos deben ser ple de tórax es el método usual de diagnósti-
ejecutados en forma ordenada y con meticu- co en la mayoría de los casos, con frecuencia
losa atención a los detalles de asepsia y de son la fluoroscopia o la ultrasonografía los

122
CAPÍTULO V: GUÍA PARA LA PRÁCTICA DE TORACENTESIS Y DE TORACOSTOMÍA CERRADA

métodos que guían la ejecución de una tora- borde que marca el límite superior del espa-
centesis. cio intercostal utilizado para el acceso.

La posición del diafragma debe ser tenida en Es decir, siempre se avanza sobre el borde
cuenta, recordando que éste se halla a unos superior de la costilla inferior.
3-5 cm por encima del nivel que aparece en
la radiografía (en inspiración) del tórax, y que La aguja calibre 21 se utiliza, ya infiltrado el
cuando existen condiciones patológicas de la espacio, para explorar la cavidad pleural, intro-
pleura se lo puede encontrar anormalmente duciéndola en profundidad y aspirando, para
elevado. La cardiomegalia pronunciada repre- detectar el nivel de profundidad de la cavidad
senta un riesgo real de lesión del miocardio pleural. La salida de aire o de líquido indica
en el curso de una toracentesis. que la punta de la aguja se encuentra en la
posición correcta. Se marca el nivel de profun-
Los procedimientos de toracentesis, toracosto- didad colocando sobre la aguja una pinza he-
mía de tubo y succión torácica aparecen bien mostásica a ras con la piel, y se retira la aguja
descritos e ilustrados en los artículos y mono- calibre 21. Se pasa ahora la aguja gruesa (ge-
grafías que se enumeran al final en las refe- neralmente calibre 14-16), o el trócar de dre-
rencias bibliográficas. naje, hasta el nivel previamente determinado
y se inicia la evacuación de la cavidad pleural
utilizando una jeringa de 50 ml y una llave de
TORACENTESIS tres vías.

Usualmente la toracentesis se practica a tra- Personalmente prefiero, una vez que la punta
vés del 6º espacio intercostal posterior, con el de la aguja gruesa (o del trócar) ha ingresado
paciente sentado y sus brazos reposando en a la cavidad pleural, introducir a través de ésta
una almohada colocada sobre la mesa hospi- un catéter y retirar la aguja, con el objeto de
talaria; el médico y la enfermera deben ase- evitar, utilizando el catéter para evacuar el lí-
gurar la tranquilidad y comodidad del pacien- quido o el aire, una posible lesión de la pleura
te. El nivel del 6º espacio corresponde, en esta visceral o del parénquima pulmonar con la
posición, al ángulo inferior de la escápula. aguja o con el trócar.
Ocasionalmente se punciona el 7º espacio,
pero nunca un nivel inferior, puesto que esto Un “venocath” calibre 14 puede servir el mis-
resultaría en lesión del diafragma, o del híga- mo propósito durante la fase inicial de la eva-
do si el procedimiento se realiza sobre el lado cuación pleural, pero una vez que se adosan
derecho. las superficies pleurales, en la medida que se
reexpande el pulmón, tiende a angularse y a
Se infiltra la piel sobre el espacio intercostal obstruirse.
con xilocaína utilizando una aguja fina (cali-
bre 24) y luego con una aguja calibre 21 de El equipo de toracentesis. Los equipos co-
1_ pulgadas se infiltra el espacio apoyándose merciales de toracentesis traen aguja-catéter
en el borde superior de la costilla que marca o trócar-catéter, con la ventaja que se men-
el límite inferior de este espacio (generalmen- cionó. Si no se dispone de un equipo comer-
te la 7ª): así se evita lesionar el paquete vascu- cial, el hospital debe mantener sus propios
lonervioso intercostal ubicado inmediatamente equipos reesterilizables de toracentesis, que
bajo el borde inferior de la costilla superior, deben incluir:

123
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

a. Campos estériles, pinzas de campo. rina para análisis citoquímico; en otro sin hepa-
b. Tres pares de guantes estériles. rina para cultivos y en otro sin heparina (ojalá
c. Algodones, gasas y pinzas para limpieza 50 a 100 ml) para análisis citológico.
de piel.
d. Solución antiséptica para preparar la piel Terminada la evacuación de la cavidad pleural
(yodóforo, clorhexidina o similar). se decide sobre la necesidad de instalar suc-
e. Lidocaína para anestesia local por infiltra- ción pleural continua, de acuerdo con las nor-
ción. mas establecidas en el protocolo correspon-
f. Aguja hipodérmica fina (calibre 24) para diente. Si no se instala succión, se coloca una
infiltración de la piel, y jeringa de 5 ml para venda estéril sobre el sitio de la punción.
la lidocaína.
g. Aguja calibre 21 y jeringa de 10 ml para La toracentesis es un procedimiento que de-
aspiración de la cavidad pleural y determi- manda asepsia estricta.
nar profundidad y características del líqui-
do allí contenido.
h. Hoja y mango de bisturí. TORACOSTOMIA CERRADA
i. Trócares de toracentesis de diversos
calibres. La inserción de un tubo de tórax está indica-
j. Pinzas hemostásicas: Kelly (dos), mosquito do en pacientes con:
(dos), Rochester (una).
k. Pinzas de disección: con garra (una), sin a. Neumotórax traumático y ciertos casos de
garra (una). neumotórax espontáneos.
l. Tijeras: una de tamaño mediano, y una de b. Hemotórax de consideración.
tamaño pequeño. c. Lesiones penetrantes toracoabdominales.
m. Porta-agujas y suturas de calibre grueso d. Como procedimiento profiláctico en casos
(0) para fijar el tubo y de calibre fino (3-0, seleccionados de fracturas costales mayo-
4-0) para suturar la piel. res o de heridas penetrantes sin evidencia
n. Llave de tres vías y conectores para los clínica de neumotórax en quienes se pro-
tubos, de calibres correspondientes. ponga iniciar una operación por otras ra-
o. Jeringas: una de 20 ml y una de 50 ml para zones o respiración mecánica con un ven-
aspirar. tilador.
p. Recipiente para recibir el líquido aspirado. e. Para drenaje de hidrotórax maligno y/o ins-
q. Tubos estériles para cultivos y para exa- tilación de agentes quimioterapéuticos
men del líquido. (pleurodesis).
r. Material para venda y para asegurar el tubo f. Piotórax.
a la piel.
s. Catéteres (o tubos) de toracentesis de di- La colocación de un tubo de tórax por tora-
versos calibres para succionar o para co- costomía cerrada es un procedimiento delica-
nectar a drenaje bajo sello de agua o a suc- do y potencialmente peligroso, por lo cual sólo
ción permanente. debe ser ejecutado por personal profesional
debidamente capacitado y con experiencia.
Si se extrae líquido, éste debe ser analizado
desde el punto de vista químico, microbiológi- Usualmente el tubo se inserta por el aspecto
co y citológico, según el caso particular: se lateral del tórax, a nivel de la línea axilar ante-
recoge líquido en un tubo de ensayo con hepa- rior o de la línea axilar media, a través del 4º

124
CAPÍTULO V: GUÍA PARA LA PRÁCTICA DE TORACENTESIS Y DE TORACOSTOMÍA CERRADA

espacio intercostal cuando se trata de neu- maño adecuado para el calibre del tubo
motórax, o a nivel de la línea axilar media pos- escogido (Kelly, Rochester, o similar), y con
terior, y a través del 5º o 6º espacio intercostal disección digital, siempre cargándose so-
cuando se trata de un hemotórax. No deben bre el borde superior de la costilla que mar-
insertarse tubos sobre la pared posterior del ca el límite inferior del espacio, a fin de evi-
tórax, que resultarían en incomodidad y obs- tar el paquete vasculonervioso que corre
trucción del sistema de succión cuando el pa- bajo el borde inferior de la costilla superior,
ciente adopta la posición de decúbito dorsal. se penetra el espacio intercostal y con el
Tal ubicación, sin embargo, puede ser nece- dedo se explora la cavidad pleural para
saria en casos de colecciones loculadas. comprobar que no existan adherencias del
pulmón a la pared torácica.
El procedimiento se realiza bajo estrictas f. La penetración del espacio intercostal pue-
condiciones de asepsia con buena iluminación de también ser efectuada por medio de un
y con el equipo adecuado, mediante la se- trócar de calibre suficiente para dar cabida,
cuencia siguiente: una vez en la cavidad pleural, al tubo esco-
gido. La técnica digital es más segura en
a. Infiltración local, igual que para una tora- cuanto a evitar una lesión del pulmón.
centesis, pero utilizando una dosis mayor g. Se introduce el tubo 32F para drenar líquido
del agente anestésico (5 mL de lidocaína y de calibre menor para drenaje de aire)
al 1%). por medio de una pinza hemostásica (Kelly
b. Incisión de 2 cm de longitud ligeramente o Rochester, según su tamaño) o a través
por debajo del nivel escogido para que el del trócar, dirigiéndolo en sentido cefálico
tubo quede en una posición levemente obli- con una angulación oblicua de unos 35°, y
cua a través de la pared del tórax y con se avanza dentro de la cavidad torácica
ello evitar escapes alrededor del tubo. hasta la longitud previamente determinada.
c. Punción con aguja calibre 21 y succión con h. Se cierra la incisión alrededor del tubo, uti-
una jeringa de 10 mL para ubicar la costilla lizando suturas a los lados del tubo, o una
inferior y su borde superior, así como la sutura de tipo “colchonero”. Se asegura el
profundidad de la cavidad pleural. Logrado tubo a la pared del tórax mediante suturas,
el ingreso a la cavidad pleural, se marca el de suficiente profundidad, de material no
nivel de profundidad sobre la aguja explo- absorbible (seda o nylon, calibre 0 a 2-0) y
radora. se coloca una gasa impregnada en vaselina
d. Se escoge el calibre del tubo y se determi- para sellar cualquier escape, se aplica una
na la longitud del segmento que debe ser venda estéril y se cubre herméticamente
introducido a la cavidad torácica, marcan- con esparadrapo de tela. Se asegura tam-
do tal nivel con una ligadura de seda o con bién el tubo a la pared torácica por medio
una pinza hemostásica colocada sobre el de esparadrapo ancho de tela, para garan-
tubo. Generalmente se introduce el tubo por tizar que el tubo no se salga accidental-
una longitud de unos 15 cm. mente.
e. Utilizando una pinza hemostásica se abre i. Se conecta el tubo a succión torácica con-
y se diseca el espacio subcutáneo; se ex- tinua utilizando la unidad de plástico de suc-
plora la región con el dedo para ubicar el ción torácica (Pleuravac, Pleura-Guard,
borde superior de la costilla que marca el etc.) o el sistema de tres botellas, según el
límite inferior del espacio intercostal. Dise- protocolo correspondiente. Los succiona-
cando con una pinza hemostásica de ta- dores Gomko son utilizados sólo temporal-

125
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

mente y durante el transporte del pacien- de antibióticos profilácticos; los antibióticos se


te. La succión torácica usual es mantenida utilizan en obediencia a otras indicaciones.
a un nivel de 15-20 cm de agua.
El manejo del neumotórax espontáneo se ha-
La reexpansión del pulmón generalmente pro- ce con un catéter delgado o con un tubo 22 F,
duce dolor y tos cuando las hojas pleurales en los casos no complicados, según el proto-
se adosan, sobre lo cual debe ser advertido colo correspondiente del Departamento de Ci-
el paciente. rugía de la Fundación Santa Fe de Bogotá (Pa-
tiño y Arroyo,1990). Sin embargo, hoy es cre-
La toracostomía cerrada para inserción de un ciente el abordaje toracoscópico inmediato,
tubo de tórax usualmente no requiere el uso que permite la corrección de la causa, gene-
ralmente una bula enfisematosa.

Figura 1. Luego de practicar una pequeña incisión Figura 2. Se introduce un dedo a través del tracto
sobre la piel del espacio intercostal escogido, de 2 creado con la pinza hemostásica, con el objeto
cm de longitud, y de llevarla a través del tejido sub- de palpar y comprobar que no hay adherencia
cutáneo, se introduce una pinza nemostásica te- del pulmón a la pleura parietal. Usualmente se uti-
niendo como guía el borde superior de la costilla liza el dedo meñique cuando se va a introducir un
inferior, para evitar lesión del paquete tubo 20F o el dedo índice cuando se va a utilizar
vasculonervioso que se encuentra ubicado por un tubo 36F. En este momento se colocan una o
debajo de la costilla superior. Con la pinza dos suturas profundas las cuales van a ser poste-
hemostásica, abriéndola y cerrándola, se avanza riormente utilizadas para fijar el tubo.
a través del espacio intercostal y se perfora la
pleura, entrando así a la cavidad torácica.

126
CAPÍTULO V: GUÍA PARA LA PRÁCTICA DE TORACENTESIS Y DE TORACOSTOMÍA CERRADA

Figura 3. Se toma el tubo con un pinza hemostásica Figura 4. Ubicado el tubo en la posición intrapleural ade-
grande ( de tipo Rochester) y se lo introduce hasta cuada, se procede a fijarlo, atando las suturas previamen-
la cavidad pleural. Los orificios del tubo aparecen te colocadas, teniendo en cuenta que la atadura quede
ilustrados; obsérvese que el tubo ha sido recorta- suficientemente apretada para producir identación de la
do en su punta para lograr un mejor drenaje. Se pared externa del tubo, pero evitando que la luz sea ocluida,
retira la pinza y se avanza manualmente el tubo aún parcialmente. En general, se utilizan una o dos suturas
para asegurar que todos los orificios quedan den- adicionales para cerrar la piel alrededor del tubo. Se colo-
tro de la cavidad pleural. ca una venda seca (no se recomienda gasa vaselinada ni
lubricada) y se hace una fijación adicional externa del tubo
por medio de esparadrapo o de otro material adhesivo. Se
conecta la succión o el drenaje pleural.

Inserción del trócar y del tubo de tórax

127
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Adrales G, Huynh T, Broering B, et al. A 7. Pacanowski JP, Waack ML, Daley BJ, et al. Is routine
thoracostomy tube guideline improves manage- roentgenography needed after closed tube
ment efficiency in trauma patients. J Trauma. 2002; thoracostomy removal? J Trauma 2000; 48:684-688.
52:210-214. 8. Palesty JA, McKelvey AA, Dudrick SJ. The efficacy
2. Aleman C, Alegre J, Armadans L, et al. The value of X-rays after chest tube removal. Am J Surg
of chest roentgenography in the diagnosis of 2000;179:13-16.
pneumothorax after thoracentesis. Am J Med 1999; 9. Petersen S, Freitag M, Albert W, et al. Ultrasound-
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3. Bell RL, Ovadia P, Abdullah F, et al. Chest tube patients. Intensive Care Med. 1999;25:1029-1027.
removal: end-inspiration or end-expiration?. J 10. Petersen WG, Zimmerman R. Limited utility of
Trauma 2001; 50:674-677. chest radiograph after thoracentesis. Chest. 2000;
4. Diaz G, Castro DJ, Perez-Rodriguez E. Factors 117:1038-1042.
contributing to pneumothorax after thoracentesis. 11. Rozycki GS, Pennington SD, Feliciano DV.
Chest 2000; 117:608-609. Surgeon-performed ultrasound in the critical care
5. Fartoukh M, Azoulay E, Galliot R, et al. Clinically setting: its use as an extension of the physical
documented pleural effusions in medical ICU examination to detect pleural effusion. J Trauma
patients: how Useful is routine thoracentesis? 2001; 50:636-642.
Chest 2002; 121:178-184. 12. Villena V, Lopez-Encuentra A, Pozo F, et al.
6. Martino K, Merrit S, Boyakye K, et al. Prospective Measurement of pleural pressure during
randomized trial of thoracostomy removal therapeutic thoracentesis. Am J Respir Crit Care
algorithms. J Trauma 1999; 46:369-371. Med 2000; 162:1534-1538.

128
CAPÍTULO VI: LAVADO PERITONEAL PARA DIAGNÓSTICO

CAPÍTULO VI

Lavado peritoneal para diagnóstico

Freddy Pineda, MD
Departamento de Cirugía,
Fundación Santa Fé de Bogotá

D esde hace cuatro décadas el manejo del


trauma severo en los servicios de urgen-
cias se ha apoyado en el lavado peritoneal
Debe ser considerado como método coad-
yuvante, nunca como excluyente o sustitutivo
de otros.
para diagnóstico (LPD), concepto y técnica in-
troducidos por Root y colaboradores en 1965. Ciertamente es el mejor método en aquellas
instituciones que no posean facilidades para
Las modernas técnicas de imagenología diag- TAC y otras tecnologías diagnósticas, en las
nóstica, como la TAC, la ultrasonografía, la cuales sigue siendo de importancia primaria
arteriografía y la resonancia magnética, no han porque ahorra costos y hace expedita la toma
desplazado ni reemplazado totalmente al LPD, de decisiones. Sus ventajas se pueden sinte-
el cual se mantiene como procedimiento de tizar así:
primera línea en la evaluación de pacientes
seleccionados con trauma abdominal cerra- 1. Simplicidad en su ejecución: puede ser prac-
do e incluso con trauma penetrante. El LPD ticado por médicos generales con entrena-
tiene especial aplicación en lugares donde no miento y en la misma camilla del paciente.
estén disponibles las técnicas de imageno- 2. Porque requiere mínimo tiempo para su
logía diagnóstica. ejecución, permite la toma precoz de deci-
siones, como la de practicar laparotomía.
El procedimiento consiste en la introducción 3. Tiene altas tasas de certeza y de precisión
a la cavidad peritoneal de una solución de diagnósticas.
Lactato de Ringer y su recuperación posterior 4. Se acompaña de mínima morbilidad.
con fines de diagnóstico. 5. Es de bajo costo.

La TAC, en comparación con el LPD, es un


VENTAJAS DEL LAVADO método de mucha importancia en la evalua-
PERITONEAL PARA DIAGNÓSTICO ción del trauma abdominal pero es de com-
pleja ejecución, por cuanto requiere más tiem-
El lavado peritoneal es un método sencillo, po, tanto para la administración del medio de
seguro, con mínimas complicaciones y de bajo contraste como para la realización del estudio.
costo, que puede ser practicado sin demora, Además, es necesario transportar al paciente
al lado de la cama del enfermo y no requiere (lo cual puede ser difícil en personas en esta-
la movilización del paciente a otra unidad, do crítico), depende de un especialista para
como ocurre con la TAC. la interpretación de las imágenes y es de ele-
vado costo.

129
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DESVENTAJAS DEL LAVADO Estee método es más efectivo que las pun-
PERITONEAL ciones abdominales para diagnosticar sangra-
do intra-abdominal: 80% de los pacientes con
1. Baja especificidad, aunque muy alta sen- punciones negativas y lavado peritoneal po-
sibilidad, lo cual puede llevar a algunas sitivo, tienen lesiones viscerales significativas.
laparotomías innecesarias. La sensibilidad
para sangrado intraperitoneal es >98%.
2. Falla en detectar lesiones retroperitoneales INDICACIONES
y del diafragma. Esta es una limitación im-
portante que siempre se debe tener en 1. Politraumatismo con hipotensión persisten-
cuenta frente a un LPD negativo. te no explicada por hemorragia externa,
intratorácica o esquelética.
2. Politraumatismo con lesión craneoencefá-
PACIENTES QUE REQUIEREN lica y alteraciones de conciencia.
LAVADO PERITONEAL DIAGNÓSTICO 3. Traumatismo abdominal no penetrante con
signos de lesión grave en la pared abdo-
Se utiliza sobre todo en pacientes con trauma minal.
abdominal cerrado, pero también puede ser 4. Estado comatoso, de embriaguez o bajo
útil en el manejo de ciertas heridas corto pun- acción de drogas de efecto neurológico y
zantes abdominales y en algunas heridas por con huellas de traumatismo múltiple.
arma de fuego abdominales y toracoabdomi- 5. Politraumatismo con lesión de medula espi-
nales en pacientes asintomáticos o con muy nal y alteraciones de la sensibilidad secun-
leve sintomatología. darias al traumatismo.
6. Lesión grave de la región inferior del tórax.
No se aconseja explorar las heridas toracoab- 7. Herida penetrante en un hemitórax por de-
dominales. bajo del quinto espacio intercostal, con sos-
pecha de lesión diafragmática o visceral.
El lavado peritoneal está indicado en pacientes 8. Politraumatismo con lesiones graves de los
con abdomen dudoso, en quienes el resultado tejidos blandos en dos extremidades, una
de punciones y del resto de exámenes es ne- superior y una inferior.
gativo, en pacientes inconscientes por trau-
ma, en pacientes con sección medular a un La indicación del lavado en el diagnóstico del
nivel que cause abolición de la sensibilidad abdomen agudo de tipo médico no es clara
del abdomen y, finalmente, en pacientes poli- en la actualidad.
traumatizados que van a ser llevados a ciru-
gía diferente de la abdominal y en quienes se
quiere descartar patología abdominal. PROCEDIMIENTO

En algunos servicios de urgencias se emplea A fin de evitar confusiones diagnósticas, el


rutinariamente como procedimiento primario lavado peritoneal debe hacerse después de
en pacientes con el sensorio alterado por trau- tomar las imágenes radiológicas pertinentes.
ma craneoencefálico, por intoxicación alcohó-
lica, por abuso de drogas y en casos de heri- Equipo
das toracoabdominales. 1. Sonda vesical.
2. Sonda nasogástrica.

130
CAPÍTULO VI: LAVADO PERITONEAL PARA DIAGNÓSTICO

3. Alcohol yodado o yodopovidona. 4. En un punto situado en la línea media, 2 a 3


4. Jeringa de 10 ml para anestesia. cm por debajo del ombligo (o paramediano,
5. Lidocaína al 1% ó 2 % con epinefrina. 1 cm lateral al ombligo) se infiltra anestesia
6. Agujas hipodérmicas calibres 18 y 22. local; se prefiere lidocaína al 1% con epi-
7. Campo estéril. nefrina o lidocaína al 2% con epinefrina para
8. Mango de bisturí No.3. disminuir las posibilidades de sangrado.
9. Hoja de bisturí No.11. 5. Se incide la piel en 2 a 3 cm; en pacientes
10.Dos pinzas hemostáticas de Kelly. obesos pueden ser 6 cm.
11.Un par de separadores de Farabeuf. 6. Mediante separadores adecuados y hacien-
12.Una tijera de disección. do meticulosa hemostasia (para evitar re-
13.Un porta-agujas. sultados falsos positivos por contaminación
14.Vicryl® 2-0. de la cavidad peritoneal con sangre de la
15.Prolene® 3-0. pared) se avanza a través del tejido subcu-
16.Un trócar No.14F. táneo y se separan los haces musculares.
17.Una sonda de Nelaton No. 10F o un caté- 7. Se toma la fascia con pinzas (“clamps”),
ter de diálisis peritoneal, o un equipo de se incide la fascia y se atraviesa con gran
venoclisis. cuidado la grasa preperitoneal para expo-
ner el peritoneo, el cual se toma con pin-
El sitio de preferencia, para la punción o la zas y se incide.
incisión, es la línea media, a 2 ó 3 cm por de- 8. Se introduce suavemente un catéter de diá-
bajo del ombligo. Si el paciente tiene cicatrices lisis peritoneal tratando de llevarlo hacia la
quirúrgicas en la línea media, debe evitarse pelvis, en la dirección del fondo de saco
este acceso e incidir en cambio a 3 cm por de Douglas. Si no se dispone de este tipo
encima del ombligo o sobre el borde lateral de catéter, se puede emplear el tubo de un
del recto abdominal a la altura del ombligo. equipo de venoclisis desprovisto de empa-
tes distales, al cual se le hacen unos quin-
El catéter puede ser introducido puncionando ce orificios que abarque cada uno, como
la pared abdominal simplemente, lo que se máximo, un cuarto de la luz del tubo.
conoce como método cerrado, o abriendo la 9. Se conecta a una jeringa y se aspira. Si se
pared por planos incluyendo el peritoneo, lo obtiene sangre, bilis, líquido intestinal, ori-
que se conoce como método abierto. na o materia fecal, el procedimiento es con-
siderado positivo y se procede a laparoto-
Se prefiere la técnica abierta porque tiene mía. Si la aspiración es negativa se conti-
pocas complicaciones y produce menos resul- núa con los pasos siguientes.
tados falsos positivos. 10.Se coloca una sutura en jareta para ase-
gurar que no haya escape de líquido alre-
PASOS EN LA TÉCNICA ABIERTA dedor del catéter, y se instilan entre 10 y
1. Se introduce sonda vesical y se conecta a 20 mL/kg de lactato de Ringer o de solu-
drenaje. ción salina tibios, hasta completar 1 litro,
2. Se introduce sonda nasogástrica y se as- en lapso de 10 a 15 minutos.
pira el estómago. 11.Cuando el líquido se encuentre en el abdo-
3. Se prepara la pared anterior del abdomen men, se balancea al paciente (o la camilla)
ampliamente, como para laparotomía, y se para lograr su distribución en toda la cavi-
colocan campos estériles. Asepsia con al- dad peritoneal y su mezcla con la sangre
cohol yodado o yodopovidona. que allí pueda encontrarse.

131
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

12.Tras 5 a 10 minutos se procede a drenar el se obtienen <5 ml, se procede al lavado


líquido a un recipiente colocado en el piso con 1 litro de lactato de Ringer tibio en el
(no menos de 1 metro por debajo del abdo- adulto y 15 ml/k en niños
men del paciente): se drena sin aspirar, por
efecto de sifón y gravedad, por lo cual el ESTUDIO E INTERPRETACIÓN DEL LÍQUIDO
recipiente debe tener escape de aire (no OBTENIDO
puede ser un sistema cerrado). Si es posi-
ble, se cambia la posición del paciente y se El LPD se caracteriza por alto índice de cer-
comprime suavemente el abdomen con la teza, >98% para trauma abdominal cerrado,
mano. Si el líquido no sale, debe conside- con muy bajas tasas de resultados falsos ne-
rarse la posibilidad de ruptura del diafragma. gativos; en trauma abdominal penetrante la
13.Se examina el líquido, tomando por lo me- predicción llega a 87,5%, la sensibilidad a
nos cuatro muestras: una para recuento de 95,8% y la especificidad a 93,8%.
eritrocitos y leucocitos, otra para amilasa,
la tercera para bilis y la cuarta para colora- 1. Positivo (trauma abdominal cerrado):
ción con Gram. 1.1 Aspiración de >10 ml de sangre
14.Se sutura la fascia con material sintético 1.2 Hematíes >100.000/mm3.
absorbible, se cierra la piel y se coloca ven- 1.3 Leucocitos >500/mm3.
daje. 1.4 Amilasa >175 UI/l.
1.5 Presencia de bilis, bacterias o restos
PASOS EN LA TÉCNICA CERRADA alimentarios.

La técnica, descrita por Lazarus y Nelson en 2. Positivo (trauma abdominal penetrante):


1979, es la preferida en muchos servicios de 2.1 Hematíes >10.000/mm3.
urgencias.
3. Negativo (trauma abdominal cerrado):
1. Se introducen sondas vesical y nasogástrica. 3.1 Hematíes <50.000/mm3.
2. Se prepara la piel del abdomen. 3.2 Leucocitos <100/mm3.
3. Se colocan campos estériles y se infiltra la 3.3 Amilasa <75 UI/l.
piel con lidocaína al 1% con epinefrina.
4. Se hace una pequeña incisión en la piel, 4. Indeterminado (trauma abdominal cerrado):
apenas lo suficiente para dar paso a la agu- 4.1 Hematíes >50.000 y <100.000/mm 3.
ja y luego al catéter de lavado. 4.2 Leucocitos >100 y <500/mm 3.
5. Se introduce una aguja calibre 18 hasta la 4.3 Amilasa >75 y <175 UI/l.
cavidad peritoneal y se pasa una guía flexi-
ble a través de la aguja. En algunos casos estaría indicada la laparos-
6. Se retira la aguja, se pasa el catéter de la- copia para identificar la lesión y tomar alguna
vado, con un movimiento como “atornillan- decisión en cuanto a la necesidad de someter
do” sobre la guía y cuando se ha llegado a el paciente a laparotomía. Los hallazgos nega-
la cavidad, se retira aquella. tivos no excluyen lesión abdominal severa,
7. Se aspira la cavidad peritoneal instilando especialmente del páncreas, del duodeno o
antes entre 10 y 20 ml de solución salina o de ambos, que son órganos retroperitoneales,
de lactato de Ringer. Si se obtiene sangre o del diafragma. En estos casos se debe
(>5 ml) el lavado es considerado positivo y proceder, si la situación clínica lo amerita, a
se da por terminado el procedimiento. Si practicar TAC y otros métodos diagnósticos.

132
CAPÍTULO VI: LAVADO PERITONEAL PARA DIAGNÓSTICO

El recuento de leucocitos es muy útil en lesio- 3. Cirrosis avanzada.


nes intestinales donde la presencia de eritro- 4. Coagulopatía preexistente.
citos puede ser negativa. 5. Pacientes no colaboradores.
6. Distensión abdominal. Obstrucción intesti-
La precisión diagnóstica del método es de 90 nal mecánica. Ileo adinámico.
a 95%. La tasa de falsos negativos oscila entre
1,6% y 5% y se ven principalmente en heridas
penetrantes, en heridas retroperitoneales y en
heridas aisladas de intestino. La tasa de fal- LECTURAS RECOMENDADAS
sos positivos es del orden del 2,4% y se ven
1. American College of Surgeons. ATLS, Programa
primordialmente en heridas penetrantes, en Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médicos.
fracturas de pelvis o en grandes hematomas Sexta edición. Comité de Trauma del Colegio Ame-
retroperitoneales. ricano de Cirujanos. Chicago, 1997.
2. Brakenridge SC, Nagy KK, Joseph KT, et al. Detec-
COMPLICACIONES tion of intra-abdominal injury using diagnostic peri-
toneal lavage after shotgun wound to the abdo-
1. Sangrado en la incisión o punción, lo cual men. J Trauma 2003; 54:329-331.
3. Feliciano DV. Diagnostic modalities in abdominal
puede ocasionar un resultado falso positi-
trauma. Peritoneal lavage, ultrasonography, com-
vo. Hematoma de pared abdominal. puted tomography scanning, and arteriography.
2. Perforación intestinal por el catéter y peri- Surg Clin North Am 1991;71:241-256.
tonitis secundaria. 4. Harrigill KM, Miller HS, Haynes DE. The effect of
3. Laceración de la vejiga (cuando no ha sido intraabdominal irrigation at cesarean delivery on
debidamente evacuada). maternal morbidity: a randomized trial. Obstet
4. Lesión de vasos mayores o de otros órga- Gynecol 2003; 101:80-85.
nos abdominales. 5. Maxwell-Armstrong C, Brooks A, Field M, et al.
Diagnostic peritoneal lavage analysis: should trau-
• Perforación de vasos iliacos.
ma guidelines be revised?. Emerg Med J 2002;
• Desgarro de vasos mesentéricos. 19:524-525.
• Infección de la herida, alrededor de 1,6% 6. Mayo A, Kluger Y. Use of diagnostic peritoneal
de los casos. lavage (DPL) as a tool for minimizing nonthera-
• Hernia en el sitio del procedimiento. peutic laparotomy rate. J Trauma 2003; 54:204.
7. Pal JD, Victorino GP. Defining the role of computed
CONTRAINDICACIONES ABSOLUTAS tomography in blunt abdominal trauma: use in the
hemodynamically stable patient with a depressed
level of consciousness. Arch Surg 2002;
1. Indicación clara de laparotomía inmediata.
137:1029-1032; discussion 1032-1033.
2. Historia de múltiples operaciones abdomi- 8. Peris J, Planas M. Lavado peritoneal y diagnósti-
nales previas. Antecedente de síndrome co. En: Manual de Medicina Intensiva. Editado por
por adherencias. JC Montejo, A García de Lorenzo, C Ortiz et al.
Mosby. St Louis, 1996.
CONTRAINDICACIONES RELATIVAS

1. Obesidad extrema.
2. Embarazo.

133
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VII

Trauma de arteria carótida

Carlos Hernando Morales Uribe, MD


José Andrés Uribe Múnera, MD
Francisco Gómez Perineau, MD
Departamento de Cirugía
Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia
Medellín

L as lesiones de los vasos del cuello consti-


tuyen un 10% del total de las lesiones vas-
culares; más del 95% son causadas por trau-
Las lesiones iatrogénicas ocurren en el cur-
so de procedimientos radiológicos endovas-
culares y durante actos quirúrgicos complejos
ma penetrante, siendo la arteria carótida co- en la región cervical.
mún (carótida primitiva) el segmento lesionado
con más frecuencia.
CUADRO CLÍNICO Y AYUDAS
En un total de1.607 lesiones de arteria carótida DIAGNÓSTICAS
(AC) en 11 series publicadas se encontró una
mortalidad promedio de 17%. La incidencia Hay signos y/o síntomas que no dejan ningu-
de déficit neurológico permanente entre los na duda para diagnosticar la lesión y que se
sobrevivientes es de 40%; de ahí la importan- han denominado signos inequívocos o “duros”;
cia de un pronto y adecuado tratamiento en y otros que carecen de dicha exactitud, los
los servicios de urgencias. llamados sugestivos o “blandos”.

Para las lesiones vasculares cervicales los


MECANISMOS DE LESIÓN signos inequívocos son:
• Sangrado profuso por la herida.
Las lesiones de la AC pueden ser cerradas, • Hematoma pulsátil.
penetrantes o iatrogénicas. • Presencia de soplo o frémito.
• Ausencia de pulsos temporales.
El trauma cerrado de la carótida se presen-
ta por fuerzas de aceleración y desaceleración Los signos sugestivos son:
en accidentes de tránsito y por caídas desde • Presencia de un hematoma.
alturas. • Historia de shock o de sangrado masivo.
• Compromiso neurológico (hemiparesia,
El trauma penetrante se presenta cuando ob- parestesias de miembros superiores, sín-
jetos cortantes, punzantes o contundentes y drome de Horner).
proyectiles de armas de fuego de carga única • Trayecto vascular del proyectil.
o múltiple cruzan el músculo platisma del • Disminución de pulsos temporales.
cuello.

134
CAPÍTULO VII: TRAUMA DE ARTERIA CARÓTIDA

IMÁGENES DIAGNÓSTICAS tellos metálicos que impiden una buena valo-


ración. La experiencia inicial con este método
El tratamiento de las lesiones penetrantes cer- diagnóstico en el Hospital Universitario San
vicales debe ser selectivo, lo que implica que Vicente de Paúl de Medellín ha sido reporta-
sólo sean llevados a cirugía los pacientes en da por Múnera, quien halló tasas de especifi-
quienes haya certeza de lesión. La arterio- cidad y sensibilidad superiores a 95%.
grafía de 4 vasos del cuello es la prueba diag-
nóstica de elección para confirmar o descar- Se está evaluando por distintos grupos el pa-
tar lesiones vasculares en cualquiera de las pel de la angio-resonancia como nueva he-
tres zonas del cuello. Este examen demues- rramienta diagnóstica en el trauma vascular
tra con exactitud la morfología de las arterias cervical.
vertebrales, las arterias carótidas comunes y
sus ramas interna y externa. Tiene la ventaja
de establecer desde la fase preoperatoria la TRATAMIENTO
circulación colateral existente.
Al igual que en todos los casos de trauma, un
Pero la recomendación para hacer arteriogra- paciente con lesiones del cuello requiere el
fía sólo se justifica en los pacientes que clíni- enfoque de soporte avanzado para la vida
camente tengan signos objetivos, pues se trata después de trauma (ATLS del Colegio Ameri-
de un procedimiento invasor no exento de ries- cano de Cirujanos).
gos. Cuando está indicada, tiene altas tasas
de sensibilidad y especificidad para el diagnós- En las lesiones vasculares del cuello no de-
tico de lesión vascular cervical. ben realizarse maniobras como pinzamientos
o ligaduras vasculares para contener el san-
La ecografía Doppler del cuello, sobre la grado; sólo se recomienda la utilización de
cual se escribió ampliamente en la década de vendaje compresivo o compresión digital.
los noventa, es una prueba confiable en casos
de trauma vascular cervical. Entre sus venta- Una vez reanimado el paciente, se debe hacer
jas se cuentan su menor costo ante la arterio- un examen físico completo para diagnosticar
grafía y el no ser un procedimiento invasor; las lesiones asociadas. De manera rápida se
sus principales desventajas son las de ser debe registrar la información pertinente en
operador-dependiente y no poseer la capaci- cuanto a antecedentes personales y a los
dad de dibujar el resto de la vasculatura cer- eventos previos al ingreso del paciente al ser-
vical. La ecografía Doppler tiene una sensibili- vicio de urgencias, especialmente sangrado
dad de 91%-100% y una especificidad de masivo y pérdida transitoria de la conciencia.
85%-98% para lesiones vasculares del cuello.
Es importante evaluar y consignar los signos
La angiografía por tomografía computado- vitales al ingreso, la localización de la herida,
rizada con reconstrucción tridimensional es el objeto causante y su trayectoria. No se debe
otra modalidad de diagnóstico de lesiones vas- introducir ningún tipo de instrumento, incluyen-
culares cervicales, también mínimamente in- do el dedo del evaluador, para definir trayec-
vasora. Su exactitud es buena en lesiones ce- torias, puesto que estas maniobras facilitan
rradas y en cortes nítidos de las estructuras la liberación de coágulos que estén contenien-
vasculares. En lesiones por proyectil de arma do heridas vasculares que, en un sitio donde
de fuego son comunes los artificios por des- no se disponga de recurso quirúrgico inme-

135
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

diato, pueden poner en peligro la vida del pa- • Pacientes inestables: deben ser llevados
ciente. de inmediato a cirugía, puesto que ésta es
la única opción que les brinda la posibili-
Las heridas se deben localizar de acuerdo con dad de sobrevivir al trauma (Figura 1).
las zonas de trauma de cuello. Se debe tratar
de establecer si la herida cruza la línea media, Con los estudios imagenológicos arriba pro-
para lo cual se utiliza el término de herida pe- puestos se pueden obtener los siguientes re-
netrante transcervical. sultados positivos:
1. Hematoma intramural, defecto intimal o di-
Los pacientes inestables a causa de su herida sección pero con flujo distal conservado.
deben ser llevados de inmediato a la sala de 2. Seudoaneurisma con extravasación del
cirugía para la corrección de las estructuras medio de contraste.
lesionadas. 3. Fístula arteriovenosa carotídeo-yugular.
4. Oclusión arterial.
Los pacientes estables y con signos inequívo- 5. Otras lesiones.
cos de lesión vascular en las zonas I y III del
cuello se deben trasladar rápidamente para Los pacientes con hematomas intramurales,
la realización de estudios diagnósticos que defectos intimales o disección, pero con flujo
permitan seleccionar el mejor abordaje. En los distal conservado, tienen diferentes opciones
centros de atención, donde se encuentre dis- de manejo, como la anticoagulación inicial con
ponible, se debe solicitar arteriografía a la me- heparina, que luego se continúa con warfarina
nor sospecha de lesión vascular. Aquellos sin por tres meses en individuos sin lesiones ce-
signos y síntomas pueden ser observados en rebrales. En pacientes sin daño neurológico
un servicio quirúrgico por un período no infe- la corrección quirúrgica rara vez se utiliza, a
rior a 24 horas y, en caso de presentar algún pesar de ofrecer muy buenos resultados. En
signo sugestivo de lesión, deben llevarse a algunas lesiones, los grupos de radiología in-
pruebas diagnósticas que confirmen o descar- tervencionista realizan manejo endovascular
ten la sospecha. con aplicación de stent.

Los pacientes con lesiones penetrantes en la En el caso de seudoaneurismas, las posibili-


zona II se pueden encontrar en alguna de las dades de manejo son la reparación quirúrgi-
siguientes situaciones: ca, la simple observación o el manejo endo-
• Estabilidad hemodinámica sin signos ni sín- vascular (embolización con espirales con o sin
tomas de lesión vascular: se vigilan por un utilización de stents autoexpandibles). En los
lapso no menor de 24 horas y si no se pre- pacientes con seudoaneurismas expansivos
sentan signos sugestivos de lesión, son da- y/o sintomáticos se prefiere la corrección qui-
dos de alta. rúrgica.
• Estabilidad hemodinámica y signos inequí-
vocos de lesión vascular: pueden ser lle- Los seudoaneurismas con diámetro menor a
vados de inmediato a exploración quirúrgi- 5 mm, en ausencia de sangrado, de síntomas
ca para reparar la lesión. locales o de síntomas neurológicos, se pueden
• Estabilidad hemodinámica y signos suges- observar con nueva evaluación clínica e ima-
tivos pero no confirmatorios de lesión vas- genológica (idealmente con ecografía Doppler
cular: se debe practicar arteriografía o ul- a color, o de lo contrario angiografía) en 1-2
trasonido Doppler. semanas.

136
CAPÍTULO VII: TRAUMA DE ARTERIA CARÓTIDA

Las fístulas arteriovenosas carótido-yugulares, ABORDAJES Y TÁCTICAS


se deben corregir en forma temprana para lo OPERATORIAS
cual la cirugía es la mejor opción. El manejo
con embolización endovascular se plantea co- Zona I
mo una posibilidad en lesiones altas de la ar- Las lesiones de la AC en la zona I se deben
teria carótida interna. abordar por incisiones combinadas: cervicoto-
mía y esternotomía. La reparación se hace con
Las lesiones oclusivas de la arteria carótida base en los hallazgos operatorios.
interna (ACI) en pacientes con examen neuro-
lógico normal se pueden tratar con anticoagu- Zona II
lación por tres meses con el fin de evitar la Los pacientes con sangrado activo o hemato-
propagación distal del coágulo o la emboliza- ma expansivo se abordan por cervicotomía
ción hacia la circulación intracraneal. longitudinal anterior; se hace compresión, tan-

137
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

to en el sitio de sangrado como en la AC proxi- vía endovascular, como ya se mencionó. (Véa-


mal, mientras se realiza control proximal y dis- se Figura 2).
tal de la lesión. En caso de no haber trauma
craneoencéfalico o a otro nivel, se recomien-
da, anticoagulación sistémica (heparina 100 MANEJO QUIRÚRGICO EN CASO DE
U/kg) o local (50 U/mL) para evitar la formación
de trombos distales. De ser necesario, se hace
DÉFICIT NEUROLÓGICO O COMA
trombectomía con catéteres de Fogarty. Si a
pesar de ello no hay flujo retrógrado se reco- Los tres puntos de mayor controversia son:
mienda ligar el vaso proximal y distalmente.
1. Reversibilidad de los déficits neurológicos
En lesiones de la AC en las zonas I y II puede preoperatorios luego de la cirugía.
haber trauma asociado de la vía aérea. En 2. Manejo adecuado de pacientes en coma.
caso de haber filtración, luego de la corrección 3. Riesgo de infarto hemorrágico cerebral
de la herida hay riesgo de disrupción de la cuando se realiza la reparación.
sutura arterial y hemorragia exsanguinante.
Por ello se recomienda reforzar la sutura de Con base en los datos disponibles, todo pa-
la faringe y/o esófago con la porción esternal ciente con lesión penetrante de la AC, con o
del músculo esternocleidomastoideo, desin- sin déficit neurológico previo, debe ser lleva-
sertándolo de uno de sus extremos e interpo- do a reconstrucción de la misma, siempre y
niéndolo entre la vía digestiva y la arteria. Si cuando sea factible técnicamente y que haya
hay que dejar drenes, se debe evitar que cru- buen flujo retrógrado.
cen la arteria sana o la lesionada.
Cuando en el examen preoperatorio se pre-
Zona III senta un valor en la Escala de Coma de Glas-
Mientras se realiza cervicotomía longitudinal gow menor de ocho, en ausencia de inestabi-
anterior, y si hay sangrado activo, se comprime lidad hemodinámica, hipotermia o intoxicación,
externamente para controlar la hemorragia; se o un infarto isquémico por estudios imageno-
continúa con esta maniobra mientras se repa- lógicos no invasores, el paciente no se bene-
ra la arteria proximal y distal de ser posible. ficia de la reconstrucción ni de la ligadura de
la arteria, siendo su mejor opción el manejo
Una vez detenido el sangrado, sea manual- expectante no quirúrgico, excepto cuando ha-
mente o con catéter, se debe definir rápida- ya otra indicación para la intervención.
mente el manejo a seguir con la lesión de la
ACI: continuar la oclusión con balón por 48
horas, exploración cervical alta con reparación TRATAMIENTO DEL TRAUMA
o ligadura, o embolización angiográfica con o CERRADO DE LA ARTERIA
sin prótesis endovascular. CARÓTIDA
En caso de lesiones asintomáticas diagnosti- Probablemente por la baja frecuencia del trau-
cadas por medio de la arteriografía, tales como ma contuso de la AC no hay consenso en la
levantamientos intimales, disecciones con literatura sobre su manejo. Una manera muy
adecuado flujo distal, seudoaneurismas meno- racional para su abordaje se puede basar en
res de cinco mm o fístulas carotídeo-yugula- la clasificación según los hallazgos angiográ-
res, se pueden manejar con observación o por ficos postulada por Biffl (Tabla 1):

138
CAPÍTULO VII: TRAUMA DE ARTERIA CARÓTIDA

TABLA 1. TIPOS DE LESIÓN DE LA ARTERIA CARÓTIDA POR TRAUMA CERRADO.

Grado de Lesión Descripción


I Irregularidad en la luz del vaso o disección, con estenosis <25%.
II Disección o hematoma intramural con estenosis >25% ó trombos en la luz del vaso, o levanta-
miento intimal.
III Seudoaneurisma.
IV Obstrucción.
V Sección con extravasación libre.

FIGURA 2. CONDUCTAS SEGÚN PRESENTACIÓN CLÍNICA (FLUJOGRAMA)

TRAUMA CARÓTIDA

+ Déficit neurológico severo –


(TC-clínica)

Trauma penetrante Trauma cerrado

Lesión menor Seudoaneurisma Fístula arteriovenosa Oclusión Otras

< 5 minutos > 5 minutos Síntomas


Síntomas

+ –
Anticoagulacióon Observar Anticoagulación

Observar o ligar Cirugía

139
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las opciones posibles que se plantean son: cuando no haya contraindicaciones para su
observación, terapia quirúrgica o intervención utilización.
no quirúrgica (anticoagulación y técnicas en-
dovasculares) de acuerdo con la sintomato- Oclusión arterial selectiva: la embolización
logía, la localización y el grado de la lesión. guiada por arteriografía de la ACI o de la arte-
ria carótida común (ACC) no se recomienda
Observación: es el estándar en los casos de por el riesgo asociado de infarto cerebral. Solo
trauma contuso que comprometen la ACI a la se recomienda en caso de sangrado de la
altura de la base del cráneo o más distales. carótida externa (ACE) y/o de sus ramas.
La dificultad en el acceso vascular impide la
reparación directa de estas lesiones. Prótesis endovascular: hay algunos reportes
exitosos sobre la utilidad de las endoprotesis
Anticoagulación: mejora el resultado en los en el manejo de seudoaneurismas secunda-
pacientes con déficit neurológico, tanto mayor rios a trauma cerrado de la ACI, siempre y
como menor, cuando se compara con el mane- cuando se realicen después de la primera
jo expectante no quirúrgico ni farmacológico. semana del trauma y que se utilice anticoagu-
El inicio del tratamiento con heparina, previo lación profiláctica.
a la aparición de los síntomas, es crítico en la
obtención de mejores resultados neurológicos.
Se considera la anticoagulación sistémica co- RECOMENDACIONES DE MANEJO
mo el tratamiento de elección para lesiones
traumáticas cerradas de la AC, no abordables Según la clasificación de los diferentes tipos
desde el punto de vista quirúrgico, siempre y de lesión (Tabla 2) las opciones de manejo son:

TABLA 2.

Tipo I La anticoagulación por tres meses como primera opción. Se debe realizar seguimiento clínico e imagenológico.
Tipo II En los casos donde el abordaje quirúrgico no presente dificultades técnicas, la corrección quirúrgica es el
manejo estándar, con buenos resultados neurológicos. Pero si hay una anatomía desfavorable para la cirugía,
el paciente debe manejarse con anticoagulación durante tres meses, con seguimiento clínico y por imágenes.
Tipo III El tratamiento operatorio es de elección siempre y cuando el abordaje quirúrgico sea factible técnicamente; de
lo contrario, se debe realizar manejo endovascular con endoprótesis, el cual se realiza siete o más días des-
pués de ocurrido el trauma. Si la corrección se realiza con endoprótesis, se prescriben antiplaquetarios durante
el mes siguiente al procedimiento.
Tipo IV En general, evolucionan muy bien desde el punto de vista neurológico, y solo requieren anticoagulación duran-
te tres meses.
Tipo V Todo paciente con este tipo de lesión se lleva a corrección quirúrgica de la arteria similar a la que se realiza en
el trauma penetrante. De no ser posible, se practica ligadura, oclusión con balón, o embolización endovascular.

140
CAPÍTULO VII: TRAUMA DE ARTERIA CARÓTIDA

TRATAMIENTO 3. Biffl WL, Ray CE, Moore EE. Noninvasive diagno-


sis of blunt cerebrovascular injuries: a preliminary.
INTERDISCIPLINARIO J Trauma 2002; 53:850-856.
4. Bynoe R, Miles W, Bell R et al. Non invasive diag-
En la atención del paciente con trauma de AC nosis of vascular trauma by duplex ultrasono-
convergen los esfuerzos de varias disciplinas: graphy. J Vasc Surg 1991; 14:346-352.
médico general, urgenciólogo, cirujano gene- 5. George S, Croce M, Fabian T et al. Cervicothoracic
ral y vascular, anestesiólogo, intensivista, neu- arterial injuries: recommendations for diagnosis
and management. World J Surg 1991; 15:134-139.
rólogo, neurocirujano y otros. El cirujano gene- 6. Hiatt J, Busuttil R, Wilson S. Impact of routine
ral debe estar en capacidad de realizar la aten- arteriography in penetrating neck injuries. J Vasc
ción inicial del paciente con estas lesiones y Surg 1984; 1:860-866.
referir en ocasiones algunos pacientes en la 7. Kumar S, Weaver F, Yellin A. Cervical vascular
injuries. Carotid and yugular venous injuries. Surg
fase preoperatoria y en la postoperatoria a
Clin North Am 2001; 81:1331-1344.
otros especialistas. La adecuada atención 8. Morales C, Sanabria A, Sierra J. Vascular trauma
postquirúrgica en la unidad de cuidados inten- in Colombia. Experience of a level I Trauma Center
sivos y en el período postoperatorio tardío de- in Medellín. Surg Clin North Am 2002; 82:195-210.
terminan en buena parte el pronóstico y la re- 9. Rao P, Ivatury R, Sharma P, et al. Cervical vascular
injuries: A trauma center experience. Surgery
habilitación de los pacientes con este tipo de
1993; 114:527-531.
trauma. 10. Rivers S, Patel Y, Delany H et al. Limited role of
arteriography in penetrating neck trauma. J Vasc
Surg 1988; 8:112-116.
LECTURAS RECOMENDADAS 11. Roon A, Christensen N. Evaluation and treatment
of penetrating cervical injuries. J Trauma 1979;
19:391-397.
1. American College of Surgeons. ATLS. Colegio 12. Sclafani S, Cavaliere G, Atwen N et al. The role of
Americano de Cirujanos, Sexta edición. Chicago, angiography in penetrating neck trauma. J Trau-
1997. ma 1991; 31:557-562.
2. Asensio J, Gómez H, Falabella A et al. Trauma de 13. Weaver F, Yellin A, Wagner W et al. The role of
cuello. En: A Rodríguez, J Asensio. Trauma. So- arterial reconstruction in penetrating carotid inju-
ciedad Panamericana de Trauma. Bogotá, 1997. ries. Arch Surg. 1988; 123:106-111.

141
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VIII

Lesiones del diafragma

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Jefe Honorario, Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

L as lesiones del diafragma constituyen un


verdadero desafío diagnóstico, y es un
hecho que su historia natural continúa siendo
suprarrenales y el páncreas: por sus tres aber-
turas principales pasan la vena cava inferior,
el esófago (a través del hiato esofágico) y la
bastante desconocida. Existen pocos estudios aorta.
en la literatura, en esta era de medicina basa-
da en la evidencia, que documenten si, a cien- Las lesiones del diafragma, aunque raras, no
cia cierta, todas se deben reparar. Pero se sa- son infrecuentes en los grandes centros de
be que las lesiones mayores del diafragma trauma. Pueden ser penetrantes, o contusas
producen consecuencias serias derivadas de por trauma cerrado. La mayor parte de las le-
la herniación de las vísceras y órganos abdo- siones por trauma cerrado, o contuso, se de-
minales, la cual puede ser masiva y éstas, por ben a accidentes automovilísticos (Reiff et al
supuesto, requieren reparación. La presenta- 2002). Asensio y colaboradores (2002) al re-
ción tardía de una hernia diafragmática, cuan- visar siete series de la literatura, encontraron
do ocurre en la fase de obstrucción o estran- que ocurren, en promedio, en el 3% de todas
gulamiento se asocia con alta morbilidad y las lesiones abdominales, y que su incidencia
mortalidad. Por ello, por principio se acepta varía entre 0,8% y 5,8% de todas las lesiones
que la demostración de una ruptura diafrag- abdominales. Tradicionalmente se acepta que
mática representa de por sí indicación quirúrgi- se encuentran en 1% a 3% de los casos de
ca. Sin embargo, no todas las rupturas del dia- trauma abdominal contuso (Reiff et al 2002),
fragma resultan en herniación. En la serie tal en 10-20% de las lesiones por trauma toraco-
vez más numerosa de trauma contuso del dia- abdominal penetrante (D´Angelica y col 1997)
fragma reportada en la literatura, entre 160 y en 5% de los pacientes que son sometidos
pacientes atendidos en 6 centros universita- a laparotomía por trauma abdominal (Brasel
rios, sólo el 75,6% de los casos desarrolló her- et al 1996).
niación de vísceras (Bergeron et al 2002).
Asensio y colaboradores (2002) anotan que,
El diafragma es la partición musculotendinosa por la localización anatómica del diafragma,
dinámica, en perpetuo movimiento, entre el las lesiones que lo afectan pocas veces ocu-
tórax y el abdomen; es el principal órgano res- rren en forma aislada.
piratorio del cuerpo, y se relaciona por su cara
superior con el pericardio y las pleuras y por La severidad del trauma no penetrante capaz
su cara inferior con el peritoneo de la cavidad de producir una lesión del diafragma resulta
abdominal. Cubre al hígado, la porción abdo- en lesión de otros órganos y regiones del cuer-
minal del esófago, el estómago, el bazo, las po, incluyendo la cabeza y el sistema nervio-

142
CAPÍTULO VIII: LESIONES DEL DIAFRAGMA

so y los huesos mayores. Así mismo, en lesio- punzante generalmente son más pequeñas
nes de los órganos torácicos y abdominales, que las resultantes del trauma cerrado
las cuales en algunas series alcanzan una in- (D´Angelica y col 1997).
cidencia superior al 90% y hasta el 100%.
En realidad, las lesiones del diafragma por El diagnóstico de las lesiones del diafragma
trauma cerrado tradicionalmente han sido con- es difícil y constituye un verdadero reto. Ante
sideradas como un indicador de gravedad del todo, hay que mantener un alto índice de sos-
trauma (Meyers & McCabe 1993), y se aso- pecha en los pacientes con trauma contuso.
cian con un ISS (Injury Severity Score) de 31 En los casos de trauma contuso el diagnóstico
a 50 y exhiben una tasa de mortalidad del or- preoperatorio se logra establecer en dos ter-
den de 7% a 42%; estas tasas no han dismi- ceras partes de los casos, alrededor del 75%,
nuido en comparación con publicaciones de y en un 15% de estas lesiones el diagnóstico
tiempo atrás. La ruptura contusa del diafragma viene a ser tardío. Se han informado casos, y
rara vez es causa de muerte de por sí, y la personalmente he tenido tal experiencia, en que
mortalidad más bien se relaciona con las le- el diagnóstico se hace décadas después de
siones asociadas (Bergeron et al 2002; Brasel ocurrido el trauma. En los pacientes que son
et al 1996). operados por trauma y razones diferentes de
la lesión diafragmática, el diagnóstico preope-
La literatura informa una frecuencia tres veces ratorio de esta lesión sólo se logra en algo me-
a cuatro veces mayor de las lesiones del hemi- nos del 40% (Bergeron et al 2002). Cuando de
diafragma izquierdo en comparación con las trata de trauma penetrante sobre la región tora-
del lado derecho, especialmente en los casos coabdominal izquierda, la sospecha de lesión
de trauma cerrado. En las lesiones contusas, del diafragma es, por supuesto, más acentua-
el hecho tal vez se explica por la acción amorti- da, pero también es difícil establecer la presen-
guadora y protectora del hígado (Asensio et cia de la lesión diafragmática a la luz de los
al 2002). signos clínicos y los hallazgos en radiografías
simples de tórax y abdomen.
La American Association for the Surgery of
Trauma ha propuesto la siguiente clasificación Asensio y colaboradores (2002) citan a H.I.
de las lesiones del diafragma (Moore et al Bowditch, quien describió los criterios para el
1994; Asensio et al 2002): diagnóstico de la hernia diafragmática trau-
mática, los cuales, sin embargo, no se encuen-
Grado Descripción de la herida
tran con este grado de precisión en la mayo-
I Contusión ría de los casos:
II Laceración <2 cm
III Laceración 2 a 10 cm 1. Prominencia e inmovilidad del hemitórax
IV Laceración >10 cm con pérdida de tejido izquierdo.
>25 cm2 2. Desplazamiento del área de matidez car-
V Laceración con pérdida de tejido >25 cm2 díaca a la derecha.
3. Ausencia de ruidos respiratorios sobre el
La ruptura típica del diafragma en el trauma hemitórax izquierdo.
cerrado es una laceración radial que va desde 4. Presencia de ruidos intestinales en el
la parte tendinosa central hacia la parte poste- hemitórax izquierdo.
rior y lateral del diafragma. Las lesiones por 5. Timpanismo a la percusión en el hemitórax
trauma penetrante por arma de fuego o corto- izquierdo.

143
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Clásicamente se han descrito tres fases en la reside en pacientes hemodinamicamente es-


historia natural de las hernias diafragmáticas tables sin evidencia de lesiones asociadas.
traumáticas con base en el tiempo de presen- Murray y colaboradores (1998), en un estudio
tación (Asensio et al 2002): sobre 110 pacientes con heridas penetrantes
del hemitórax inferior izquierdo encontraron
1. La fase inmediata luego del accidente, en que la laparoscopia en pacientes con lesio-
la cual se encuentran síntomas, signos y nes ocultas (asintomáticas y sin signos radio-
hallazgos radiológicos agudos. lógicos positivos) identificó la lesión en 24%
2. La fase de intervalo, durante la cual desa- de los casos, por lo cual recomiendan el pro-
parecen las manifestaciones agudas y los cedimiento en pacientes que no tienen in-
síntomas son de tipo crónico. dicación para laparotomía.
3. La fase de obstrucción o estrangulación.

La radiografía de tórax juega un papel impor- TRATAMIENTO


tante, aunque relativo, en el diagnóstico: pue-
de demostrar elevación del diafragma, irregu- Aunque por principio todas las lesiones del dia-
laridad en la imagen del diafragma o la hernia- fragma deben ser reparadas, la reparación
ción visceral, pero usualmente es positiva ape- puede ser diferida en pacientes estables y que
nas en algo más de la mitad de los casos. Por no tengan lesiones asociadas graves que pon-
ello, la radiografía simple de tórax no es de gan en peligro la vida del paciente. La necesi-
por sí capaz de excluir una ruptura del diafrag- dad de reparación se debe a la alta inciden-
ma. Pero cuando hay herniación de vísceras, cia de lesiones intraabdominales graves aso-
la radiografía de tórax es positiva en alrededor ciadas, la posibilidad de estrangulación de una
de 80% de los casos. En muchos casos son víscera herniada, las complicaciones pulmo-
las radiografías secuenciales de tórax las que nares y gastrointestinales y la dificultad para
demuestran la lesión del diafragma en la me- deshijar al paciente del ventilador, así con la
dida que se desarrolla y crece la herniación. mayor mortalidad que se observa cuando la
Los estudios con medio de contraste de los reparación se realiza en la fase obstructiva
tractos gastrointestinales alto y bajo son de (Bergeron et al 2002).
utilidad para demostrar herniaciones viscera-
les; si se está en la fase inmediata, es preferi- Al iniciar el proceso de decisión sobre trata-
ble utilizar gastrografina, en tanto que en las miento quirúrgico de una lesión diafragmática,
fases tardías se puede utilizar bario, a menos se deben tener en cuenta los siguientes prin-
que se sospeche estrangulamiento o necrosis cipios generales:
del estómago o de una víscera hueca. La ultra-
sonografía ha demostrado ser útil en ciertos • La ruptura contusa del diafragma de por sí
casos, y la tomografía axial computadorizada no es causa de inestabilidad hemodinámica
(TAC) tiene un valor diagnóstico relativo por y rara vez es causa de muerte.
su baja especificidad. En general es más de- • La decisión de operar en un paciente en
mostrativa la resonancia magnética. quien se sospeche lesión contusa del dia-
fragma se toma con base en la presencia
La laparoscopia, y también la toracoscopia, de lesiones asociadas que ponen en peli-
han adquirido creciente interés tanto en el gro la vida del paciente.
diagnóstico como en la reparación de las lesio- • Diferir la reparación del diafragma en pa-
nes del diafragma, y su aplicación principal cientes estables y sin lesiones graves aso-

144
CAPÍTULO VIII: LESIONES DEL DIAFRAGMA

ciadas es una conducta aceptada (Berge- protésica (Slim et al 1998). Cuando hay sig-
ron et al 2002). nos de perforación, es preferible la laparo-
• En pacientes hemodinámicamente esta- tomía por el peligro de que con la laparos-
bles se debe emprender la exploración qui- copia pase desapercibida alguna lesión
rúrgica urgente. (Hüttl et al 2002).
• Signos de irritación peritoneal o de hemo-
tórax masivo o neumotórax mayor y no con- En el caso de lesiones toracoabdominales iz-
trolable hacen imperativa la operación de quierdas por heridas penetrantes, que se aso-
urgencia. cian con una alta incidencia de lesiones del
• La reparación estándar se hace por laparo- diafragma (40-90%), la conducta generalmen-
tomía o por toracotomía, pero mayor parte te es quirúrgica. En estos casos la laparosco-
de las lesiones del diafragma se pueden pia ha probado ser un elemento diagnóstico
corregir por laparotomía. valioso, pero se debe estar alerta ante la po-
• La reparación laparoscópica (o toracoscó- sibilidad de neumotórax a tensión con el neu-
pica) ha probado ser efectiva a corto y lar- moperitoneo (Murray et al 1997).
go plazo, y, como todas las técnicas mini-
mamente invasoras, tiene creciente favo- En pacientes en quienes se sospeche lesión
ritismo en el paciente hemodinámicamente del diafragma, se debe tener máxima precau-
estable y sin signos de perforación de una ción con la inserción de un tubo nasogástrico,
víscera hueca (Murray et al 1998), y la téc- por la posibilidad de perforación del esófago o
nica permite, inclusive, aplicar una malla del estómago cuando hay herniación visceral.

145
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Algoritmo para trauma toracoabdominal penetrante, fase aguda (Asensio y col 2002)

Trauma toracoabdominal
penetrante

Reanimación
según ATLS

Tubo NG si no hay
contraindicaciones

RX Tórax

Normal Anormal

Indicaciones Sin indicación Indicaciones Sin indicación


quirúrgicas quirúrgica quirúrgicas quirúrgica
presentes: presentes:
toracotomía o toracotomía o
laparotomía laparotomía

Lado derecho Lado izquierdo Lado derecho Lado izquierdo

O examinar Observar Laparoscopia O examinar Considerar Laparoscopia


diafragma Repetir o toracos- diafragma TAC o toracos-
RX Tórax copia copia

146
CAPÍTULO VIII: LESIONES DEL DIAFRAGMA

Algoritmo para evaluación de lesiones cerradas del diafragma según AA Guth,


L Pechter y U Kim. Pitfalls in the diagnosis of blunt diaphragmatic injury.
Am J Surg 1995; 170:5-9.

TRAUMA CONTUSO
DEL TRONCO

Evaluación en
Urgencias

Historia
Examen Físico
RX de tórax

Positivo

Positivo
Laparotomía TAC
de urgencia
Indeterminado
pero se mantiene
sospecha de lesión
de diafragma

Positivo Ultrasonido
toracoscopia
Resonancia
magnética
Gamagrafía

Negativo

Observación

Nota: en este algoritmo se puede cambiar toracoscopia por laparoscopia, que es un procedi-
miento que permite una fácil visualización y reparación de la lesión.

147
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS 6. Hüttl TP, Lang R, Meyer G. Long-term results after


laparoscopic repair of traumatic diaphragmatic
1. Asensio JA, Demetriades D, Rodríguez A. Lesio- hernias. J Trauma 2002; 52:562-566.
nes del diafragma. En: Trauma. Editado por KL 7. Meyers BF, McCabe C. Traumatic diphragmatic
Mattox, DV Feliciano, EE Moore. Cuarta edición. hernia. Occult marker of serious injury. Ann Surg
McGraw-Hill Interamericana. México DF, 2002. 1993; 218:783-790.
2. Bergeron E, Clas D, Ratte S, et al. Impact of 8. Moore EE, Malangoni MA, Cogbill T, et al. Organ
deferred treatment of blunt diaphragmatic rupture: injury scaling. IV. Thoracic, vascular, lung, cardiac,
a 15-year experience in six trauma centers in and diaphragm. J Trauma 1994; 36:300-
Quebec. J Trauma 2002; 52:633-640. 9. Murray JA, Demetriades D, Asensio JA, et al.
3. Brasel KJ, Borgstrom DC, Meyer P, et al. Predictors Occult injuries to the diaphragm: prospective
of outcome in blunt diaphragm rupture. J Trauma evaluation of laparoscopy in penetrating injuries
1996; 41:484-487. to the left lower chest. J Am Coll Surg 1998;
4. D´Angelica M, Morgan AS, Barba CA. Trauma de 187:6126-630.
diafragma. En: Trauma. Editado por A Rodríguez 10. Murray JA, Demetriades D, Cornwell EE, et al.
y R. Ferrada. Editores asociados: J Asensio, DV Penetrating left thoracoabdominal trauma. J Trau-
Feliciano, F Holguín. Sociedad Panamericana de ma 1997; 43:624-626.
Trauma. Impresora Feriva SA. Colombia, 1997. 11. Reiff DA, McGwin G Jr, Metzger J, et al. Identifying
5. Guth AA, Pachter HL, Kim U. Pitfalls in the diag- injuries and motor vehicle collision characteristics
nosis of blunt diaphragmatic injury. Am J Surg that together are suggestive of diaphragmatic
1995; 170:5-9. rupture. J Trauma 2002; 53:1139-1145.

148
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

CAPÍTULO IX

Heridas de la mano

Raúl E. Sastre Cifuentes, M.D.


Jefe Unidad Cirugía Plástica
Universidad Nacional de Colombia

Aldo G. Beltrán Pardo, M.D.


Residente I Cirugía Plástica
Universidad Nacional de Colombia

NOMENCLATURA
Y DENOMINACIONES

P ara todas las descripciones que se harán


en este texto, se utilizará la nomenclatu-
ra internacionalmente aceptada, en la que se
para evitar posibles confusiones siempre, tan-
to en la mano como en el antebrazo, hablare-
mos de dos caras: una dorsal y otra palmar o
denominan los elementos anatómicos en latín, volar.
casi siempre haciendo referencia a su función
y ubicación.
CONSIDERACIONES GENERALES
Los dedos se cuentan de primero a quinto,
iniciando con el pulgar, que sería el primer No es común que las lesiones de la mano sig-
dedo, por lo que el índice será el segundo y el nifiquen riesgo vital, y la mayoría de ellas se
meñique el quinto. Cada estructura tendrá una pueden manejar dentro del concepto de ur-
orientación radial o cubital, con respecto a su gencia diferida, es decir, tratamiento básico,
cercanía relativa a dichos huesos. Así, cada que consiste en proteger y adecuar la herida,
dedo tendrá una mitad radial y otra cubital, controlar el edema, prevenir la rigidez articular
que se corresponde con la ubicación de los y, finalmente, programar la reparación de las
paquetes vasculonerviosos. Entonces, la mi- estructuras lesionadas en la primera o segunda
tad radial del índice será la adyacente al pri- semana subsiguientes. Aquellas que son ur-
mer dedo, mientras que su mitad cubital esta- gencias inaplazables, como las amputaciones
rá al lado del dedo medio. De igual manera se y el síndrome compartimental, aunque requie-
hablará al referirse a otras estructuras como ren una conducta inmediata, casi nunca com-
ligamentos, tendones y además, para la des- prometen, por si solas, la vida del paciente.
cripción de lesiones y accidentes anatómicos,
movimientos y desviaciones. En la valoración inicial debe cumplirse con los
siguientes puntos:
En cuanto a superficies, la denominada posi-
ción anatómica hace que la palma sea la cara • Inspección: una mirada al paciente, la ac-
anterior del miembro superior. Sin embargo, titud que asume y otros detalles más finos

149
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

como posición y movimientos de su miem- veniencia de un procedimiento recons-


bro superior pueden dar una idea del gra- tructivo complejo. El paciente hipertenso
do de lesión e indicar las medidas a apli- no controlado obliga a ajustar la insufla-
car de inmediato como, por ejemplo, la ción del torniquete, a ordenar tratamien-
obtención de hemostasia. to antihipertensivo o a diferir la urgencia.
- Antecedentes traumáticos: lesiones an-
• Historia clínica: para obtener una historia tiguas en la mano afectada pueden cam-
clínica adecuada es necesario considerar biar el plan de tratamiento.
que el paciente está ansioso, atemorizado, - Antecedentes toxicoalérgicos: el consu-
en un lugar extraño, y se encuentra a la mo de sustancias como cigarrillo, alco-
expectativa de las consecuencias que pue- hol o alucinógenos altera el pronóstico
de traerle a corto y largo plazo su lesión. de manera directamente proporcional a
Por eso se debe tranquilizar a la persona y la cantidad utilizada.
explicarle que las posibilidades de trata- - Antecedentes farmacológicos: el empleo
miento dependen de su colaboración. El de aspirina u otro anticoagulante debe
interrogatorio debe ser breve y conciso e interrogarse, al igual que reacciones
incluir los siguientes datos en relación con alérgicas, por ejemplo, a la penicilina.
el paciente: - Inmunización antitetánica: el antecedente
- Dominancia o lateralidad: el hecho de de vacunación completa y un refuerzo en
que la lesión comprometa la mano do- los últimos cinco años, brindan una pro-
minante obliga al médico a ser conser- tección adecuada contra la proliferación
vador en su manejo, e influirá en el pro- del Clostridium tetanii en la herida.
nóstico laboral del paciente.
- Ocupación: los criterios de conservación Con respecto al trauma: “Cómo, dónde y
máxima de determinada característica, cuándo?”
dependen de la actividad laboral y los - Mecanismo del trauma, objeto causante:
pasatiempos del paciente. En personas las heridas causadas por elementos cor-
que hacen trabajos duros, lo que se bus- tantes sufren menos trauma local que
ca es perder la menor cantidad de fuer- las causada por contusión, arrancamien-
za, mientras que en un oficinista se pre- to, o corte por sierra dentada.
fiere conservar la motricidad y la sensi- - Ambiente en el que se produjo: el riesgo
bilidad finas. de infeción de la herida se incrementa
- Antecedentes médicos: la existencia de por contaminación con material orgáni-
patologías de base como diabetes melli- co de origen vegetal o animal.
tus, arteriosclerosis e hipertensión, afec- - Tiempo de evolución: se dice que el cre-
tan el pronóstico vascular. Artritis reuma- cimiento de colonias bacterianas hasta
toidea o degenerativa, incrementan el llegar a un grado infectante se da en las
riesgo de rigidez articular. Enfermeda- primeras seis horas de evolución de la
des con inmunosupresión, predisponen herida.
a infecciones severas. Coagulopatías a - Grado de desvascularización o isque-
tener en cuenta en hemorragias que no mia: los procesos de defensa de la in-
ceden, y antes de programar un proce- fección y de cicatrización se afectan por
dimiento quirúrgico. Alteraciones del la isquemia. La proliferación del Clostri-
sensorio o del estado mental hacen que dium tetanii se facilita en tejidos hipo-
se evalúe muy bien la factibilidad y con- perfundidos.

150
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

- Tratamiento inicial: todas las medidas Las siguientes son las convenciones que se
que haya tomado el paciente o el perso- utilizarán en todos los flujogramas:
nal que lo atendió en primera instancia,
pueden influir en el pronóstico de la le-
sión, principalmente sobre el control de Inicio Conducta Final
la infección mediante el lavado de la he-
rida. Al cuánto tiempo de producida la
lesión se hizo? Con qué y dónde? Quién Decisión, alternativa Remisión a CIRUGÍA
lo llevó a cabo: amigo, familiar, enferme- Especialista.
ra o médico? Con anestesia o sin anes-
tesia? Un lavado sin anestesia siempre Conducta Pasar a otro (#)
debe considerarse como una simple lim- (diagnóstica Flujograma
pieza superficial, ya que el dolor no per- o terapéutica).
mitirá un lavado exhaustivo.
○ ○ ○
Proceso alternativo.
• Examen Físico: después de realizar una
inspección más detallada de la posición de
la mano y la actitud del paciente, su grado HEMOSTASIA
de movilidad, etc., se comenzará la evalua-
ción sistemática de la mano lesionada. Por Las dos principales arterias de la mano son la
eso, de aquí en adelante, se describirá, pa- radial y la cubital, que se originan de la hume-
so a paso, la secuencia del examen físico, ral. El aporte final de la cubital es mayor en
sus hallazgos más comunes, la sospecha proporción que el de la radial gracias a que
diagnóstica y la conducta a seguir, en for- de la arteria cubital se desprenden ramas co-
ma de flujogramas de manejo. mo las arterias interóseas (que son afluentes
de los arcos carpianos). En lesiones distales
del miembro superior, el sangrado puede pro-
FLUJOGRAMAS ducirse tanto en sentido retrógrado como ante-
rógrado, debido a las dos grandes anastomo-
CONSIDERACIONES Y CONVENCIONES sis entre la radial y la cubital: los arcos palma-
res superficial y profundo. El superficial, más
Antes que nada, es conveniente aclarar que, distal, es la terminación de la cubital, mientras
aunque estos esquemas de evaluación y ma- que el profundo, más proximal, es la prolonga-
nejo muestran las variables más frecuentes ción de la rama principal de la radial. Del arco
que se pueden encontrar en las lesiones de superficial se desprenden las arterias comu-
la mano, pueden existir situaciones en las que nes digitales, principales responsables de la
no sea posible hallar aquí alguna condición perfusión de los dedos, que tienen una fuente
específica. Por eso mismo, estos cuadros de- alterna por las comunicantes y las arterias me-
ben ser tomados como lo que son: una guía tacarpianas palmares, que nacen del arco pal-
para organizar y racionalizar conductas, mas mar profundo y su comunicación con la red
no un esquema rígido que no admite variacio- arterial dorsal, delgada y de distribución irre-
nes, puesto que cada paciente es distinto y, gular.
como tal, la visión clínica acerca de uno u otro
puede cambiar. En cuanto al drenaje venoso, la mano cuenta
con dos sistemas: el profundo, que acompaña

151
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

en su recorrido a las arterias, y el superficial, logran es comprimir el sistema venoso, que


que forma una intrincada red dorsal. Por esta se ingurgita y sangra más. El torniquete ideal
razón, las lesiones en el dorso de la mano ge- es el neumático, con presión controlada con
neran más edema y éstasis venosa. En los manómetro, como el empleado para procedi-
dedos, la red venosa cuenta con válvulas que mientos quirúrgicos. Este se puede suplir con
hacen que el flujo se dirija de dorsal a palmar, un manguito de tensiómetro al cual se le adap-
de distal a proximal y de radial a cubital. ta una llave de tres vías entre la pera y el man-
guito, con el fin de eliminar los puntos de es-
En cuanto a hemostasia se puede decir, en pri- cape y mantener constante la presión, que
mera instancia que, aunque es muy frecuente debe ser 100 mm Hg mayor que la tensión
que las lesiones de la mano produzcan un san- arterial sistólica del paciente.
grado abundante, también la posibilidad de que
este ceda con maniobras sencillas es muy gran- El músculo isquémico genera intenso dolor
de. Tal vez las únicas excepciones a esta regla que se hace intolerable luego de 20 minutos,
son los pacientes con coagulopatías y las le- tiempo que debe aprovecharse al máximo
siones parciales arteriales, que impiden la con- para ligar el vaso sangrante, lavar la herida,
tracción completa de la pared arterial. Las ma- valorar la magnitud del trauma e intentar iden-
niobras sencillas a las que se hace referencia tificar las estructuras lesionadas. Con anes-
son la compresión manual en el lugar del san- tesia general o regional el tiempo de torniquete
grado, y la elevación de la extremidad afecta- jamás deberá superar las dos horas.
da. Como estas maniobras resultan incómo-
das para el paciente y, de vez en cuando, su
aplicación debe prolongarse, es importante PERFUSIÓN
advertirle al paciente que estas conductas son
necesarias e indispensables para que el san- En la valoración de la perfusión de la mano
grado cese y motivarlo para que él mismo con- se manejan muchas variables diferentes, que
tinúe con las medidas hemostáticas. son importantes de considerar a la hora de
tomar una decisión terapéutica. El color y la
Resulta más que importante anotar que ante temperatura son signos que orientan sobre la
la evidencia de un sangrado profuso muchas oxigenación y el flujo sanguíneo periférico. El
personas se verían tentadas a aplicar pinzas principal indicador de la perfusión es el llena-
hemostáticas. Esta conducta es inapropiada, do capilar, que se examina en los pulpejos y
debido a que es posible que junto con la es- los lechos ungueales. En condiciones de tem-
tructura sangrante se pinze un nervio u otros peratura ambiental media, debe ser de 2 a 3
elementos anatómicos, cuya lesión aumenta segundos. Si es menor se habla de un llenado
las consecuencias negativas del trauma. capilar rápido que indica un exceso de san-
gre en el tejido. Cuando es mayor de 3 se-
En caso de sangrado abundante, que luego gundos se habla de un llenado capilar lento
de varios intentos no cede con la elevación y que indica una hipoperfusión arterial. Cuando
compresión, se debe pensar en una lesión está ausente alerta sobre una situación de
seria, y la alternativa adecuada sería el pinza- isquemia. La presencia de pulso no siempre
miento selectivo y la ligadura en campo exan- quiere decir que la arteria está indemne puesto
güe bajo torniquete. Los sistemas compresi- que, gracias a las múltiples anastomosis dista-
vos caseros, realizados con trozos de tela, no les, ese pulso que se palpa puede ser ocasio-
ejercen una presión suficiente y lo único que nado exclusivamente por el flujo retrógrado a

152
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

través del extremo distal de una arteria lesio- lechos de drenaje son insuficientes, se debe
nada. Este signo clínico no es posible palparlo realizar una sangría del segmento afectado,
en niveles distales a la muñeca o en segmen- lo que equivaldría a la aplicación de una san-
tos cutáneos avulsionados. guijuela. Una forma fácil de hacerlo es por me-
dio de la escarificación terapéutica, que con-
El llenado capilar rápido indica congestión de siste en realizar pequeños cortes tangenciales
los lechos vasculares, lo que puede deberse con un bisturí en el área afectada y, para im-
a procesos inflamatorios como los originados pedir la coagulación, limpiar el coágulo que
por quemaduras e infecciones. Las lesiones se forma con una gasa empapada en hepari-
dorsales o circunferenciales, como por ejem- na. Este sencillo procedimiento es de gran
plo lesiones por anillo, comprometen el drena- ayuda para aliviar las congestiones venosas,
je venoso y linfático causando congestión. En pero es sólo una medida temporal, mientras
principio, si los sistemas de drenaje mantienen se consigue remitir al paciente a un centro es-
la suficiencia, la elevación basta para que la pecializado, donde se realizará, generalmen-
congestión remita. Sin embargo, cuando estos te, un injerto venoso.

153
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Con todo, la lesión más importante, aunque grado marginal puede permitir la sobrevida de
poco frecuente, es el síndrome compartimen- tejidos como piel, hueso y tendones, pero no
tal, que obedece a un aumento de presión den- su adecuada cicatrización o defensa contra
tro de los compartimentos que albergan a los la infección, por lo que se debe realizar una
distintos gurpos musculares. Su etiología pue- revascularización. En caso contrario, donde
de ser diversa, pero lo más frecuente es que el sangrado es nulo, se debe refrigerar el seg-
sea secundario a lesión vascular, o a una frac- mento lesionado. Cuando se trata de amputa-
tura que genere edema abundante, por ejem- ciones totales, la refrigeración se realiza co-
plo, la supracondílea de húmero. La sangre locando la parte amputada envuelta en gasas
que escapa llena algún o algunos comparti- secas dentro de una bolsa limpia, bien cerra-
mentos y, al llegar al límite de distensibilidad da, y esta bolsa dentro de un termo con hielo.
de la fascia que los limita empieza a hacer Pero si la amputación es parcial, la duda es:
compresión sobre las estructuras vecinas más se debe cortar el pedículo remanente y conver-
lábiles, como venas y nervios. De ahí su cua- tirla en una amputación total para lograr la hi-
dro clínico característico con parestesias, au- potermia del segmento? La respuesta es no.
mento de tensión a la palpación y dolor inso- Simplemente, se envuleve la porción compro-
portable a la extensión de los dedos. Contra- metida en gasas empapadas con solución
rio a lo que se podría pensar, es común encon- salina helada, que se cambia a medida que
trar síndromes compartimentales francos, con recuperan la temperatura ambiente.
pulsos arteriales presentes, porque la presión
de las arterias de mediano calibre alcanza a Por último, se menciona el test de Allen, prue-
vencer la resistencia ejercida dentro del com- ba que sirve para medir el aporte de las arte-
partimento. En caso de estar ante un síndro- rias radial y cubital a la perfusión de la mano.
me compartimental, se debe actuar con pron- Se efectúa exprimiendo la mano y, después
titud, considerando que, entre más se tarde, de exanguinada, se comprimen las dos arte-
mayor será la isquemia muscular y nerviosa rias y se libera una de las dos, obligando a
que puede terminar produciendo la denomi- que la mano reperfunda únicamente por este
nada contractura isquémica de Volkmann, por vaso. Es útil para detectar compresiones y
fibrosis de los segmentos necrosados de mús- déficits vasculares mayores.
culo. El tratamiento en estos casos es des-
comprimir la zona afectada realizando una
fasciotomía de urgencia. SENSIBILIDAD
Cuando la extremidad está pálida, fría, y no Al referirnos a la inervación sensitiva de la ma-
tiene llenado capilar se esta, por lo general, no, tenemos que considerar, en primera ins-
frente a una amputación incompleta. Se debe tancia, el papel preponderante que esta juega
indagar la existencia de algún pequeño por- en cada acción manual que ejecutamos.
centaje de perfusión, lo cual se logra rápida-
mente haciendo una escarificación diagnós- La inervación motora y sensitiva del miem-
tica. Si el segmento comprometido sangra, bro superior proviene del plexo braquial, que
debe iniciarse terapia antiagregante (ASA 2 se origina de las raíces C5, C6, C7, C8 y T1.
mg/kg c/24 horas), medidas que minimicen la La sensibilidad de la mano está dada por las
posibilidad de espasmo de los pocos vasos terminaciones sensitivas de los tres grandes
que persisten, como calor local, y remitir con nervios del antebrazo: mediano, cubital y
prontitud al especialista, puesto que este san- radial.

154
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

Se recomienda valorar la sensibilidad al inicio Los nervios más distales de mayor importancia
del examen para evitar que la aplicación de son los colaterales digitales. Discurren por la
anestésicos locales, indispensables para el cara palmar de cada lado de los dedos, mediales
lavado adecuado de la herida, interfiera con y palmares a la arteria colateral digital, confor-
el análisis del clínico. mando los paquetes neurovasculares digitales,
a cada lado del túnel flexor. La importancia de
Los territorios sensitivos que aquí se muestran examinar cada mitad de cada dedo por separa-
son una guía aproximada del patrón sensitivo do es evidente, puesto que permite localizar con
común a la mayoría de los casos reportados exactitud las lesiones nerviosas que afectan la
por la literatura. sensibilidad de la mano.

• Nervio Radial: dorso de la primera comisura. La evaluación debe ser comparativa y com-
• Nervio Cubital: pulpejo del V dedo (meñique). prende, básicamente dos pruebas: tacto su-
• Nervio Mediano: pulpejo del II dedo (índice). perficial, rozando el dedo examinado con el

155
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dedo del examinador y preguntando al pacien- ca, y es evidente el signo de Tinel sobre el
te cuándo lo tocan y cuándo no. La otra, es cabo proximal.
tocar con un instrumento agudo y otro romo,
pidiéndole al paciente que diferencie las dos La reparación nerviosa se realiza con el con-
sensaciones. Para ello son útiles los dos ex- cepto de urgencia diferida, o sea cuando las
tremos de un lápiz. condiciones de la herida, del enfermo y del
médico tratante sean óptimas.
El ambiente de examen debe idealmente ser
sereno, y el paciente estar tranquilo. El enfer- Cuando se observa hipoestesia se debe exa-
mo ansioso describe áreas anestésicas que minar periódicamente el paciente; en caso de
no corresponden al territorio del nervio posible- persistir o empeorar el déficit se indica una
mente lesionado y con frecuencia presenta exploración quirúrgica.
“anestesia en guante”.
En los niños menores es difícil la anamnesis
Un nervio mixto seccionado totalmente dibuja y, por lo tanto una herida profunda que cruza
nítidamente el área cutánea correspondiente, el trayecto de un nervio, debe valorarse bajo
acompañada de una parálisi motora específi- anestesia.

156
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

ANESTESIA TERAPÉUTICA gue proximal de flexión de la muñeca, en


medio de los tendones de los músculos pal-
Por lo general, los traumas en la mano son mar largo y flexor radial del carpo, en un
muy dolorosos debido a la rica inervación sen- ángulo de aproximadamente 30 grados,
sitiva que posee. Esto, sumado al desconcierto con la punta apuntando hacia distal, pene-
y el temor por parte del paciente, generan en trando la aponeurosis palmar, en busca del
él bastante ansiedad, que se ve mitigada en túnel del carpo. Al penetrar la fascia, antes
gran parte cuando se consigue aliviar el dolor de encontrar parestesias, se infiltran unos
que padece. Por eso es fundamental que, des- 10 cc de lidocaína al 0,5% sin epinefrina
pués de evaluar minuciosamente el estado de y se deja actuar por un tiempo de 5 minu-
sensibilidad del paciente, si hay dolor, aplicar tos, para asegurar un bloqueo completo.
la anestesia adecuada (en cuanto a técnica y • Nervio Cubital: se ubica el tendón del fle-
fármaco), en el lugar adecuado y en el mo- xor cubital del carpo (cubital anterior) antes
mento adecuado. Esto permite lavar la herida de su inserción en el pisiforme, en el lado
en forma apropiada y terminar el examen cubital de la región volar del antebrazo, y a
físico. la altura del pliegue de flexión proximal de
la muñeca, se inserta la aguja perpendicu-
Existen tres grupos de técnicas anestésicas lar al eje del antebrazo, exactamente por
que se pueden emplear: debajo del tendón en mención, penetran-
do entre 1,5 y 2 cms, con la precaución de
• Anestesia local: es la técnica más senci- aspirar siempre que se mueva la aguja,
lla. Se trata de infiltrar, creando un habón puesto que la arteria cubital discurre por
subcutáneo, por todos los bordes de la esta zona un poco más dorsal que el ner-
herida, previa asepsia de la piel sana por vio y es susceptible de lesionarse. Enton-
donde se va a insertar la aguja. ces, en esta localización se infiltran 10 cc
• Bloqueo regional: se trata de infiltrar los de lidocaína al 0,5% sin epinefrina y tam-
tejidos que rodean un nervio (mediano, cu- bién se espera un tiempo de 5 minutos. El
bital, radial), para que el anestésico difunda bloqueo del nervio cubital puede realizar-
y bloquee la conducción desde el sitio de se también en el codo, a la altura del
infiltración en adelante. Con esta técnica epicóndilo medial, donde se palpa dicho
causamos parálisis de la musculatura in- nervio con relativa facilidad. Sin embargo,
trínseca de la mano. El estado inicial de con esta técnica se elevan las posibilida-
estos músculos, al igual que la sensibilidad des de puncionar el nervio, por lo que re-
previa al bloqueo deben consignarse. Es comendamos practicar el bloqueo cubital
importante tener en cuenta que la aguja en la muñeca y no en el codo.
nunca debe tocar el nervio, ya que se pue- • Nervio radial: a la altura de la muñeca el
den lesionar muchos axones y ocasionar nervio radial ya se ha dividido en su rama
un déficit temporal o definitivo. Si al introdu- motora (interóseo posterior) y su rama sen-
cir la aguja se produce parestesia, se debe sitiva, que avanza por el dorso de la mano
retirar la punta un poco, para evitar el ries- originando múltiples ramas sensitivas. Para
go, aún mayor, de una inyección intra- bloquearlas, se hace un habón subcutáneo
neural. justo sobre la estiloides radial, de unos 5
• Nervio mediano: en la muñeca, el nervio cc de lidocaína, y se avanza la aguja a lo
mediano se bloquea introduciendo una largo del dorso de la mano, perpendicular
aguja delgada (calibre 20 – 22) en el plie- al eje longitudinal del antebrazo, haciendo

157
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

un grán habón subcutáneo que tiene como pirar antes de inyectar el preparado anes-
fin anestesiar todas las ramas del nervio tésico, para comprobar que no se ha lesio-
radial y las de la cara dorsal del nervio nado la arteria respectiva y/o depositado
cubital. la solución dentro de un vaso.
• Bloqueo digital: para lesiones en los de-
dos, la alternativa más sencilla y eficaz es Definitivamente, en cuanto a fármacos se re-
un bloqueo digital, buscando infiltrar cerca fiere, la consideración más importante es no
de cada nervio colateral y haciendo un ha- usar anestésico con adrenalina, porque la cir-
bón dorsal para anestesiar las ramas sen- culación de la mano y sobre todo de los dedos,
sitivas dorsales. El nervio colateral palmar es terminal, y el vasoconstrictor puede causar
se busca introduciendo la aguja desde el un espasmo continuo que derive en necrosis
dorso (por ser menos doloroso) hacia la pal- de la porción anestesiada. En muchos servi-
ma, de lateral a medial, y un poco proximal cios de urgencias se encuentra lidocaina al
a la base del dedo, cerca de la comisura 1%, que tiene un inicio de acción relativamente
interdigital, con el fin de que el anestésico rápido (3 a 5 minutos) y una duración de blo-
difunda y no aumente la presión alrededor queo corta (30 a 45 minutos). Generalmente
de la circunferencia digital, puesto que pue- este tiempo es más que suficiente, pero en
de comprometerse el drenaje venoso y caso de resultar necesario un bloqueo más
producirse un síndrome compartimental en prolongado, se puede aplicar una mezcla de
el dedo afectado. Debido a la vecindad lidocaína con bupivacaína. Así se puede con-
entre cada nervio colateral y su arteria pal- tar con el inicio rápido de la lidocaína y el efec-
mar respectiva, es necesario siempre as- to duradero de la bupivacína.

158
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

MOTRICIDAD mientos y acciones de cada músculo y/o ten-


dón. Se parte siempre de una posición pasi-
El paciente, sin dolor, colabora mucho más va, en líneas grises y se llega a la posición
con el examen de la función motriz de su final, dibujada en líneas negras, describien-
mano. do un movimiento en la dirección que las fle-
chas anexas indican. En las páginas que si-
La valoración especializada incluye una pun- guen a cada flujograma se encuentran tablas
tuación de M0 a M5. En la atención primaria que describen los músculos a evaluar en cada
se pretende que se describa si el movimiento movimiento, su acción principal y otros datos
está ausente o presente. La reparación tendi- adicionales como sus diferentes nombres se-
nosa se lleva a cabo bajo los conceptos de gún las nomenclaturas descriptiva e interna-
“urgencia diferida”. cional en latín, su inervación y otros detalles
para su evaluación como, por ejemplo, el lu-
Los esquemas de evaluación que se mues- gar donde se palpa la contracción tendinosa,
tran en los flujogramas representan los movi- en el caso que esto sea posible.

159
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MUÑECA
EXTENSIÓN
DESCRIPTIVA Extensor radial largo del carpo. Extensor radial corto del carpo. Extensor cubital del carpo.
INTERNACIONAL Extensor carpi radialis longus. Extensor carpi radialis brevis. Extensor carpi ulnaris.
INERVACIÓN Radial (C6, C7) Radial (C6, C7) Radial (C7)
ACCIÓN Extensión y desviación radial Extensión del carpo. Extensión y desviación
del carpo. cubital del carpo.
EVALUACIÓN Se palpa el tendón en la base Se palpa el tendón en la base Se palpa el tendón en la base
del segundo MC. del tercer MC. del quinto MC.

FLEXIÓN

DESCRIPTIVA Flexor radial del carpo Flexor cubital del carpo


INTERNACIONAL Flexor carpi radialis Flexor carpi ulnaris
INERVACIÓN Mediano (C6) Cubital (C8, T1)
ACCIÓN Flexión de la muñeca contra resistencia. Flexión y desviación cubital del carpo.
EVALUACION Se palpa el tendón en la parte medial de la Se palpa el tendón en su inserción en el pisiforme.
cara palmar de la muñeca.

160
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

DEDOS
EXTENSIÓN
DESCRIPTIVA Extensor común de los dedos. Extensor propio del índice. Extensor propio del meñique.
INTERNACIONAL Extensor digitorum communis Extensor indicis proprius Extensor digiti quinti proprius
INERVACIÓN Radial (C7) Radial (C7) Radial (C7)
ACCIÓN Extiende la MF con la muñeca Extiende la falange proximal Extiende la falange proximal
en extensión. del índice. del meñique.
EVALUACIÓN Extensión digital con la muñeca Extiende el índice con los Extiende el meñique con los
extendida. dedos en flexión. dedos en flexión.

FLEXIÓN

DESCRIPTIVA Flexor superficial de los dedos. Flexor profundo de los dedos.


INTERNACIONAL Flexor digitorum superficialis. Flexor digitorum profundus.
INERVACIÓN Mediano (C7, C8, T1) Mediano (C8, T1) II y III dedosCubital (C8, T1)
IV y V dedos.
ACCIÓN Flexiona la IFP. Flexiona la IFD.
EVALUACIÓN Flexión IFP con los demás dedos Flexión de la IFD inmovilizando la IFP.
en extensión.

161
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PULGAR
EXTENSIÓN
DESCRIPTIVA Extensor largo del pulgar. Extensor corto del pulgar.
INTERNACIONAL Extensor pollicis longus. Extensor pollicis brevis.
INERVACIÓN Radial (C7) Radial (C7)
ACCIÓN Extiende la IF - Aduce el Pulgar Extiende la MF.
EVALUACIÓN Levantamiento del pulgar estando la palma Se palpa tendón en la tabaquera anatómica.
apoyada sobre una mesa (Retropulsión)

FLEXIÓN

DESCRIPTIVA Flexor largo del pulgar. Flexor corto del pulgar.


INTERNACIONAL Flexor pollicis longus. Flexor pollicis brevis.
INERVACIÓN Mediano (C8, T1) Mediano (C6, C7)
ACCIÓN Flexiona la IF. Flexiona la MF.
EVALUACIÓN Flexión independiente de la IF Flexión MF

ABDUCCIÓN

DESCRIPTIVA Abductor largo del pulgar. Abductor corto del pulgar.


INTERNACIONAL Abductor pollicis longus. Abductor pollicis brevis.
INERVACIÓN Radial (C7) Mediano (C6, C7)
ACCIÓN Abductor – extensor del pulgar. Antepone el 1er MC a la palma.
EVALUACIÓN Separa el pulgar de los metacarpianos Separa el pulgar en un plano perpendicular
en el mismo plano a la palma (Antepulsión)

ADUCCIÓN - OPOSICIÓN

DESCRIPTIVA Aductor del pulgar. Oponente del pulgar.


INTERNACIONAL Adductor pollicis. Oponnens pollicis.
INERVACIÓN Cubital (C8) Mediano (C6, C7)
ACCIÓN Cierra la primera comisura. Opone el primer dedo contra el quinto.
EVALUACIÓN Se palpa contracción en la primera comisura. Se palpa contracción en la eminencia tenar al
hacer la pinza I- V.

162
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

ESTABILIDAD y haciendo que la mano asuma su máximo


grado de concavidad palmar, conforman-
Todas las estructuras de la mano están sopor- do la llamada pirámide de oposición, fácil-
tadas en un complejo esqueleto que relaciona mente evidenciable al hacer converger los
entre si a todos sus elementos por medio de pulpejos del primer y quinto dedo. Se le
un fino sistema ligamentario. Funcionalmente, atribuye el agarre fuerte.
el soporte óseo de la mano está dividido en
tres unidades: Además de considerar estas unidades funcio-
nales, importantes a la hora de evaluar las
• La unidad fija de la mano, o polo central posibilidades terapéuticas en una lesión osteo-
rígido, que corresponde a la primera fila articular, se debe mirar también hacia el sis-
del carpo y los metacarpianos segundo y tema ligamentario. Básicamente, existen dos
tercero. Es el pilar fundamental de la mano, sistemas distintos: uno, que enlaza a los meta-
porque a lo largo de ella se describe el arco carpianos entre si, y otro responsable de la
longitudinal y con referencia a sus dos me- movilidad de las articulaciones digitales: meta-
tacarpianos, los tres restantes se despla- carpofalángicas (MF), interfalángicas proxima-
zan ya sea hacia palmar o hacia dorsal, les (IFP), e interfalángicas distales (IFD).
ocasionando las correspondientes variacio-
nes en el arco transversal, que permiten Los metacarpianos se unen entre si por liga-
que la mano adopte una posición ligera- mentos transversos, intermetacarpianos, ubi-
mente cóncava que potencializa las manio- cados a la altura del cuello y la cabeza del
bras de prensión, llegando hasta la oposi- segundo a quinto MC, con orientación palmar,
ción del primero y el quinto dedo o bien, que forman una cápsula junto con los ligamen-
que dicho arco se torne plano, como cuan- tos colaterales y las expansiones aponeuróti-
do la mano se encuentra totalmente abierta. cas de los tendones de extensores, lumbrica-
les e interóseos, para formar, en sus porciones
• La unidad activa de oposición, o polo dorsal y lateral el llamado capuchón extensor,
adaptativo de la oposición, está confor- reforzado en su porción palmar por la placa
mada por el trapecio y el esqueleto del pri- volar, lo que establece así una especie de caja
mer dedo, es decir, el primer metacarpiano que, en caso de fracturas de la cabeza de los
y sus falanges proximal y distal. Se ubica metacarpianos que se desplazan hacia pal-
radial al polo rígido y se desplaza hacia cu- mar, atrapa el fragmento distal y hace imposi-
bital y hacia palmar para conformar la lla- ble su reducción cerrada. La estabilización de
mada pirámide de oposición, la cual se los metacarpianos proximalmente a la MF está
completa con la acción de la tercera unidad dada por los músculos interóseos, que en caso
funcional. A este polo se atribuye la activi- de fracturas de la díafisis de algún metacar-
dad de precisión y pinza fina. piano central, aportan sostén a dicha lesión.

• La unidad activa cubital, o polo adapta- Las articulaciones interfalángicas cuentan con
tivo medial, que incluye los restantes me- dos ligamentos colaterales a cada lado: uno
tacarpianos (cuarto y quinto) y, además, las principal y uno accesorio, que se inserta en la
falanges de los dedos tercero, cuarto y placa palmar. Dichos ligamentos permiten una
quinto, tiene la capacidad de desplazarse desviación lateral variable de la articulación,
hacia radial y palmar, complementando el que nunca puede exceder de 30º. La eva-
desplazamiento de la unidad de oposición luación de dicho rango de movilidad lateral

163
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

debe hacerse comparativamente en las arti- • Muñeca en extensión de 30º.


culaciones respectivas de cada mano, y en • MF en flexión de 70º - 90º
caso de que exceda los 30º (bostezo), debe • IFP e IFD en extensión máxima, 0º.
pensarse en una lesión ligamentaria.
Ya respecto a inmovilización de lesiones es-
La inmovilización en posición de protección pecíficas, como esguinces digitales, se puede
de las diferentes articulaciones y su elevación pensar en métodos sencillos como los yugos,
constituyen la mejor medida de prevención que consisten en fijar el dedo lesionado al
contra la rigidez articular, que se desarrolla adyacente, permitiendo así una movilización
debido a la capacidad de almacenar líquidos pasiva controlada del segmento lesionado.
que tienen las cavidades articulares y a la re- Este método es útil para lesiones simples, co-
tracción de los ligamentos. Los tejidos trauma- mo fracturas no desplazadas, estables, y para
tizados producen edema, que se deposita en lesiones ligamentarias parciales 1.
dichos espacios que, si no se inmovilizan ade-
cuadamente, tienden a adoptar posiciones que Las férulas permiten mantener las articulacio-
permiten el almacenamiento de más líquido; nes en la posición de seguridad durante la fase
entonces los ligamentos se acortan originan- de formación y moldeado del edema. En lo
do contracturas. Por eso, al inmovilizar la posible deben permitir la movilidad activa de
mano se debe buscar el colocar estos liga- los dedos para estimular el retorno venoso y
mentos en su posición de máxima tensión que mantener el trofismo osteo-muscular y el
son las siguientes: deslizamineto tendinoso.

164
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

Las fracturas inestables como las oblicuas y El cierre primario se realiza únicamente en
conminutas, y las intraarticulares son, por lo heridas limpias, sin pérdidas de sustancia im-
general, de tratamiento quirúrgico. Las fractu- portantes. El cierre primario diferido se hará
ras abiertas constituyen una urgencia inapla- al finalizar la primera semana, cuando el ede-
zable en la cual el tratamiento se dirige a dismi- ma haya disminuido y el riesgo de infección
nuir el número de gérmenes contaminantes se haya superado.
en la herida mediante el lavado quirúrgico.
El cierre por segunda intención es de elección
cuando coexistan infección y pérdida de sus-
COBERTURA CUTÁNEA tancia; la herida se lava periódicamente, se
mantiene húmeda mediante apósitos impreg-
Luego de valorar la profundidad de la lesión y nados con ungüento antimicrobiano. Se con-
de reconocer las estructuras preservadas o trola el edema mediante la elevación de la
lesionadas, se debe decidir qué hacer con la mano y se estimula la movilización precoz de
herida cutánea, independientemente de la pro- los dedos.
gramación del reparo de los elementos sub-
yacentes. La decisión se toma de acuerdo al Si en caso de pérdida de sustancia se encuen-
grado de contaminación, a la perfusión de los tran expuestos huesos, nervios o tendones,
bordes y a la existencia o no de pérdida de el cierre secundario se realiza mediante un
sustancia. Nuevamente el “cómo, cuándo y colgajo local, regional o libre.
dónde?”, aporta la información necesaria.
Finalmente describiremos heridas de la mano
Los microorganismos contaminantes se con- que requieren atención específica:
vierten en patógenos por la cantidad (> 10 5/
gr), o por la agresividad del germen. La mi- • Avulsiones incompletas: arrancamiento cu-
sión del cirujano es: táneo con preservación de un pedículo. Se
debe reposicionar el tejido y observar du-
1. Modificar las condiciones de la herida y pre- rante 4 a 5 días, mientras se define el área
parar el tejido para resistir la multiplicación de necrosis para optar por cierre primario
bacteriana, sin lesionar al huésped, mejo- o secundario.
rando el flujo sanguíneo, incrementando el • Heridas puntiformes: pueden acompañarse
ingreso arterial y el egreso venoso, descom- de inóculos sépticos o químicos, inalcanza-
primiendo espacios y elevando la mano. bles mediante el lavado quirúrgico. Deben
2. Disminuir la concentración de contaminan- abrirse, drenarse y lavarse. Además, es
tes mediante la irrigación de la herida con necesario descartar una lesión arterial que
chorros intermitentes, a presión, de solu- pueda originar un falso aneurisma.
ción salina normal. • Mordeduras: son heridas altamente conta-
3. Eliminar los tejidos sin perfusión minadas. Se deben lavar y desbridar y es-
4. Impedir la formación de seromas o hemato- pecíficamente en la mano, se dejan cica-
mas dejando abierta la herida o con dre- trizar por segunda intención
naje adecuado. • Por proyectil de arma de fuego: los proyec-
5. Evitar realizar suturas a tensión que, su- tiles de baja velocidad producen poca le-
mándose al edema, incrementan la tirantez sión de tejidos blandos. Los bordes se des-
y, en consecuencia, la isquemia, la necrosis bridan, no se suturan, se favorece el cierre
y la infección. por segunda intención. Los proyectiles de

165
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

alta velocidad se comportan como las he- la perfusión. El cierre se hace primario di-
ridas por explosión. ferido o por segunda intención.
• Aplastamiento: alteran la perfusión de los • Explosión: trae los mismos efectos que el
tejidos blandos y se asocian a fracturas aplastamiento, sumando la quemadura y
conminutas. Se deben descomprimir, rea- la lesión por esquirlas. El desbridamiento
liza fasciotomías, para asegurar la irriga- será más amplio, y el cierre requerirá col-
ción de los músculos intrínsecos y mejorar gajos.

166
CAPÍTULO IX: HERIDAS DE LA MANO

LECTURAS RECOMENDADAS 16. Leddy JP. Flexor Tendons - Acute Injuries.


Operative Hand Surgery. DP Green Ed. Churchill
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167
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO X

Heridas de las extremidades.


Síndrome compartimental

Rodrigo Pesantez, MD
Departamento de Ortopedia y Traumatología
Fundación Santa Fe de Bogotá

E n el manejo de las heridas de las extremi-


dades, la patología mas importante a te-
ner en cuenta es el síndrome compartimental,
También se presenta en pacientes sometidos
a reemplazos articulares que estén recibien-
do anticoagulación.
que es el objeto de esta guía.

VASCULAR
DEFINICIÓN
Se presenta generalmente asociado con lesio-
El síndrome compartimental agudo es una nes isquémicas y por reperfusión, luego de
condición en la cual se aumenta la presión tratamientos para revascularizar una extremi-
dentro de un compartimiento fascial cerrado dad, en lesiones hemorrágicas y en alteracio-
que reduce la perfusión capilar por debajo del nes como la flegmasia cerulea dolens.
nivel necesario para la viabilidad tisular.
1. Iatrogénico: al realizar punciones vascu-
lares en pacientes anticoagulados o al co-
ETIOLOGÍA locar medicamentos por vía intravenosa/
arterial o en drogadictos.
ORTOPÉDICO 2. Lesiones de tejidos blandos: las lesiones
por aplastamiento o los traumas de tejidos
Generalmente por fracturas de tibia y antebra- blandos por alta energía presentan síndro-
zo en adultos, y por fracturas supracondíleas mes compartimentales que pasan desaper-
de codo en niños. En fracturas cerradas de la cibidos fácilmente.
tibia su incidencia es de 1,5-29% y en fracturas 3. Trauma abdominal: cerrado o abierto
abiertas de 1,2-10,2%. La incidencia es igual
en fracturas abiertas y fracturas cerradas.
SIGNOS Y SÍNTOMAS
Ocurre luego del tratamiento de fracturas,tanto
en forma no operatoria como en forma quirúr- El principal síntoma es dolor fuera de propor-
gica, con la simple manipulación de un hueso ción con la gravedad de la lesión que lo pro-
y con la inmovilizaciones con yesos. duce. Debe mantenerse un alto índice de sos-
pecha para poder realizar el diagnóstico en
forma precoz. El segundo síntoma en impor-

168
CAPÍTULO X: HERIDAS DE LAS EXTREMIDADES. SÍNDROME COMPARTIMENTAL

tancia es la parestesia en la extremidad afec- Hg, y por esta razón se ha tomado el valor de
tada. 30 mmHg como la presión indicativa para rea-
lizar fasciotomía. Otro método comúnmente
Otros signos y síntomas son compartimentos usado es la diferencia entre la presión arterial
tensos, edematizados, dolor a la extensión de media y la presión intracompartimento; si ésta
los dedos en las extremidades y cambios en es mayor de 40 mmHg, se debe realizar
la sensibilidad. La ausencia de pulso es un fasciotomía.
signo tardío en el síndrome compartimental y
su presencia sugiere lesión arterial.
TRATAMIENTO
Uno de los signos para diferenciar el síndro-
me compartimental del aumento de la presión Descomprimir el compartimiento con prontitud
en un compartimento es la discriminación de y en forma efectiva. En caso de vendajes o
dos puntos, la cual se encuentra alterada en yesos, éstos deben ser aflojados o en los ye-
forma notable en el primer caso. sos, bivalvearlos.

En todos los casos la descompresión quirúr-


DIAGNÓSTICO gica por medio de fasciotomía es vital para el
pronóstico de la extremidad. La fasciotomía
La identificación de todos estos signos y sín- se debe realizar en todos los compartimentos
tomas para el diagnóstico requieren un pacien- de la extremidad.
te conciente y colaborador; pero la mayoría
de los pacientes severamente traumatizados Antebrazo:
tienen algún grado de compromiso de su es- • Compartimento volar (anterior)
tado de conciencia. • Compartimento dorsal (posterior)

En estos casos la medición de la presión intra- Muslo:


compartimental con alguno de los métodos • Compartimento anterior
que se enumeran a continuación es de gran • Compartimento posterior
utilidad: • Compartimento medial

1. Catéter tipo Wick. Pierna:


2. Manometría con aguja. • Compartimento anterior
3. Técnica de infusión. • Compartimento lateral
4. Catéter tipo Slith. • Compartimento superficial
5. Manómetro de PVC.
La fasciotomía debe ser amplia y se debe rea-
Estas medidas deben ser usadas en pacientes lizar en las primeras seis horas después del
con compromiso del estado de conciencia, trauma para así mejorar el pronóstico. Nunca
niños, pacientes politraumatizados o en dudas debe ser hecha en forma percutánea. Siem-
diagnósticas. pre se deben incidir ampliamente la piel, el
tejido celular subcutáneo y todas las fascias
La presión normal de un compartimento en de los compartimientos musculares. Las heri-
reposo es de 0-8 mmHg. Las parestesias co- das se dejan abiertas para hacer cierre prima-
mienzan a aparecer entre los 20-30 mm de rio tardío una vez hayan cedido los síntomas,

169
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

usualmente en una semana, o, en casos ex- 3. McQueen MM. Acute compartment syndrome in
tremos, cierre por segunda intención. tibial diaphyseal fractures, J Bone Joint Surg 1996;
78: 95–98.
4. Ovre S, Hvaal K, Holm I. Compartment pressure
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LECTURAS RECOMENDADAS for decompression gives 29% fasciotomies. Arch
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170
CAPÍTULO XI: HERIDAS DE LA CARA

CAPÍTULO XI

Heridas de la cara

Martín Pinzón Navarro, MD


Sección de Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

L as heridas graves de la cara son causa


frecuente de consulta a los servicios de
urgencias. El tratamiento exitoso depende de
de la función motora o sensitiva de la cara y
el antecedente de inmunización antitetánica.

un manejo adecuado de las estructuras ana- En el examen físico se debe evaluar la locali-
tómicas involucradas. Todas las heridas de los zación, longitud y profundidad de la herida, y
tejidos blandos de la cara tienen la posibilidad registrar la función motora y sensitiva de la
de estar asociadas con fracturas del esqueleto cara. En ocasiones se requieren exámenes
facial y no deben ser consideradas triviales. especializados, como en el caso de lesiones
Puede haber lesiones sistémicas asociadas intraorales o cuando se sospechan lesiones
que retarden la atención primaria. No obstante, del conducto parotídeo.
se debe hacer un esfuerzo para tratarlas lo
antes posible a fin de evitar secuelas. El Cuando hay lesiones en la frente, se debe exa-
tratamiento definitivo se realiza cuando las minar el estado funcional de las ramas sensi-
condiciones del paciente lo permitan y las le- tivas del quinto par craneano y las ramas ner-
siones que amenaza la vida hayan sido con- viosas motoras del facial. En los párpados se
troladas. debe determinar el estado del elevador palpe-
bral y del globo ocular. En lesiones en la me-
Como con todo paciente politraumatizado, se jilla se debe examinar la función del nervio fa-
requiere el manejo inicial de la vía aérea, de cial y considerar la posibilidad de lesión del
la ventilación, el control de la hemorragia y conducto parotídeo. En las heridas de los la-
del estado neurológico. Además, se debe con- bios es pertinente registrar la función del ner-
trolar el dolor y tomar las medidas para pre- vio facial.
venir la infección.
La radiografías simples de cara o de columna
cervical están indicadas si se sospecha lesión
MANEJO INICIAL ósea. La tomografía axial computadorizada
(TAC) está indicada cuando hay trauma
La historia clínica debe ser lo más completa craneofacial grave.
posible, aclarando el mecanismo y las circuns-
tancias del trauma, el grado de contaminación En toda herida grave se debe sospechar con-
y averiguando antecedentes de alteraciones taminación por Clostridium tetani, y adminis-

171
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

trar profilaxis antitetánica según el esquema El cierre tardío primario después de las 24
que plantea la guía de Tétanos de esta mis- horas es útil en:
ma serie. • Contaminación.
• Cuando el edema de los tejidos impide el
Aunque los tejidos de la cara están ricamente cierre.
vascularizados, la hemorragia incontrolable es
rara y la frecuencia de infección en heridas En los casos de cierre primario tardío el pa-
en cara es baja, del orden de 1,5 - 7% de los ciente debe recibir antibióticos sistémicos y la
casos. Las heridas en cara se deben consi- herida se cubre con vendaje húmedo estéril
derar contaminadas cuando estén en contac- que debe permanecer por 24-48 horas o has-
to con mucosas, secreciones de cavidades, y ta el cierre quirúrgico de la herida.
en traumas severos.

Posterior a esto se debe proceder con la re- TÉCNICA DE SUTURA


paración de la herida, que se puede hacer con
anestesia local, regional o general, de acuer- Las heridas de la cara deben ser suturadas
do a las circunstancias individuales del pacien- en capas. La mucosa puede ser cerrada con
te y las lesiones asociadas. Se debe practicar material absorbible como el catgut cromado
hemostasia con presión y ligadura de vasos 4-0 o el Vicryl 4-0. Para los tejidos subepidér-
específicos que se vean sangrar. La limpieza micos también se recomienda material absor-
cuidadosa es esencial en el cuidado de toda bible 4-0. Los monofilamentos 6-0 son materia-
herida de la cara. La piel debe ser lavada con les ideales para la sutura de la piel de la cara.
jabón antiséptico y la herida irrigada con so-
lución salina a presión para hacer un barrido Los principios para un cierre de herida son:
bacteriano y del material contaminado. La heri- 1. Proveer la máxima eversión de los bordes
da debe ser examinada cuidadosamente, y to- de la herida.
dos los objetos extraños deben ser extraídos. 2. Mantener la fuerza tensil a lo largo del pro-
A veces es necesario el uso de cepillos para ceso de cicatrización de la herida.
remover el material extraño. 3. Permitir una precisa aproximación de los
bordes de la herida sin dejar marcas de la
El desbridamiento de las heridas de la cara sutura en la piel.
debe ser mínimo para evitar sacrificio innece-
sario de tejidos que son únicos y difíciles de
reemplazar. Debido a la rica irrigación de los CONSIDERACIONES ESPECIALES
tejidos de la cara, los colgajos elevados por
el trauma se pueden dejar, y en su gran ma- LABIOS
yoría sobreviven.
Tres estructuras anatómicas se deben tener
Las heridas en cara tienen mejores resulta- en cuenta en la sutura de heridas de los la-
dos si se tratan en las primeras horas de ocu- bios:
rrido el trauma. El cierre primario debe ser 1. El músculo orbicularis oris, el cual deber
realizado en las primeras 24 horas. Esta prác- ser alineado para mantener una función
tica tiene dos ventajas: labial adecuada.
1. Mejor cicatrización. 2. La unión mucocutánea debe quedar res-
2. Control de la infección. taurada para un buen resultado estético.

172
CAPÍTULO XI: HERIDAS DE LA CARA

3. La unión de la mucosa seca y húmeda debe ble. Si hay pérdida de tejido, es necesario re-
quedar alineada para obtener resultados currir a colgajos. Se recomienda remisión al
estéticos satisfactorios. especialista. Los hematomas deben ser drena-
dos con incisiones pequeñas o con agujas por
aspiración y mantener un vendaje compresi-
MEJILLA vo por cinco a siete días para evitar la recu-
rrencia del hematoma. Si no se drenan pueden
Cuando hay heridas en esta región de la cara, llevar a deformidad permanente del pabellón
se deben descartar lesiones del conducto auricular.
parotídeo y del nervio facial mediante cuida-
dosa exploración y verificación de la integri-
dad de las estructuras, y si se comprueban, el CUIDADOS DE LA HERIDA
paciente debe ser remitido al especialista.
Se recomienda la utilización de antibióticos para
prevenir la infección. Las cefalosporinas de pri-
NARIZ
mera generación, como la cefalexina o cefa-
zolina, activas contra Staphylococcus sp y
Las lesiones de la nariz son comunes y usual-
Streptococcus sp, son universalmente acepta-
mente se acompañan de fracturas nasales. Va-
das. Si la herida comunica con la cavidad oral
rían desde lesiones simples hasta lesiones com-
se recomienda el uso de penicilina, penicilina
plejas que comprometen las estructuras inter-
más metronidazol o clindamicina. La duración
nas y la cobertura interior de la nariz, las cuales
del tratamiento deber ser de cinco a siete días.
requieren reparo cuidadoso. Este tipo de lesio-
nes y/o avulsiones graves son mejor tratadas
La herida deber permanecer cubierta con un
por el especialista. A veces requieren tapona-
apósito húmedo (idealmente con ungüento anti-
miento para manejo de la epistaxis. Se reco-
biótico) por 24-48 horas. Las suturas deben ser
mienda un examen intranasal lo más completo
retiradas en los cinco primeros días. Se debe
posible para descartar hematomas septales que
evitar la exposición al sol por seis meses.
requieren manejo urgente por el especialista.

LECTURAS RECOMENDADAS
PÁRPADOS Y TEJIDOS BLANDOS ORBITARIOS
1. Curtin JW. Basic plastic surgical techniques in
Demandan una evaluación cuidadosa, sobre- repair of facial lacerations. Surg Clin North Am
todo para descartar lesiones oculares, orbi- 1973; 53:33-46.
2. Coiffmain F. Atención de urgencias en trauma de
tarias y de la vía lacrimal que requieren inter-
cara. Med UIS 1997; 11: 234-239.
consulta con el especialista. Se debe valorar 3. Davis PKB, Shaheen OH. Soft tissue injuries of
el estado de los tendones cantales interno y the face. En: Maxillofacial Injuries. Editado por NC
externo, que pueden necesitar sutura para Rowe, TE Williams. Churchill-Livingstone.
evitar secuelas de carácter estético. Edinburgh, 1994.
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Oral and Maxillofacial Surgery. Editado por RJ
En el manejo de heridas del pabellón de la Fonseca, RD Marciani, et al. WB Saunders.
oreja se debe ser lo más conservador posi- Philadelphia, 2000.

173
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XII

Principios generales de suturas en urgencias

Felipe Coifman, MD, FACS


Profesor Honorario
Universidad Nacional de Colombia
Sección de Cirugía Plástica
Fundación Santa Fe de Bogota

INTRODUCCIÓN

L a sutura de los tejidos es la primera técni-


ca quirúrgica que todo médico debe apren-
der. Es la clave de la reconstrucción de tejidos.
o espacios muertos, todo lo cual retarda la
cicatrización.
4. Evitar superficies cruentas. A veces esto
Todo médico, no importa a qué especialidad es inevitable. En tal caso se debe recurrir
se dedique, tarde o temprano se verá enfren- a otras técnicas quirúrgicas como la rota-
tado a realizar una sutura de piel. En los ser- ción de colgajos o injertos libres de piel.
vicios de urgencias de los hospitales genera- 5. Tratamiento atraumático de los tejidos.
les este acto quirúrgico no debe ser prerroga- La manipulación traumática de los tejidos
tiva exclusiva del cirujano plástico. deja millones de células muertas que se
suman a las ya causadas por la herida; se
deben emplear elementos de sutura deli-
PRINCIPIOS BÁSICOS DE CIRUGÍA cados.
6. Hemostasia cuidadosa. Los hematomas
PLÁSTICA EN LA impiden la buena cicatrización.
RECONSTRUCCIÓN DE PIEL

Hay ciertos principios de reconstrucción de la QUÉ HACER EN EL TRAUMA


piel aplicables a cualquier tipo de reconstruc-
ción de tejidos: En presencia de un paciente traumatizado con
1. Asepsia y antisepsia. La infección es la heridas de piel, se debe, en primer lugar, efec-
peor y la más frecuente enemiga de la ci- tuar una rápida inspección para determinar la
rugía. gravedad de las heridas. Las heridas de la
2. Afrontamiento de los tejidos con la mí- cara y del cuero cabelludo, por ser especial-
nima tensión posible. El exceso de ten- mente llamativas, pueden distraer la atención
sión no favorece la cicatrización y puede respecto a otras lesiones más graves que
llevar a dehiscencia y a necrosis de los te- amenacen la vida del paciente, como una he-
jidos. rida de arteria femoral o la ruptura del bazo o
3. Coaptación precisa de los bordes. El no del hígado. De inmediato se implementa el
hacerlo implica dejar superficies cruentas ABC del ATLS del Colegio Americano de

174
CAPÍTULO XII: PRINCIPIOS GENERALES DE SUTURAS EN URGENCIAS

Cirujanos para la atención inicial del paciente los tejidos; ésta es precisamente la función
traumatizado. Una historia clínica bien elabo- de la sutura. Aplicar una meticulosa técnica
rada debe incluir antecedentes sobre aplica- quirúrgica, puede hacer la diferencia entre una
ción de analgésicos, antibióticos e inmuniza- buena y una mala cicatriz.
ción antitetánica. La profilaxis del tétanos se
hace según la guía Tétanos de esta misma
serie. INSTRUMENTAL
Debe emplearse instrumental fino y delicado.
PREPARACIÓN DE LA HERIDA Sin embargo, la carencia de instrumental es-
pecializado (de cirugía plástica) no debe ser
La herida debe ser revisada cuidadosamente pretexto para no hacer una buena sutura. Ge-
para extraer cuerpos extraños. Si sus bordes neralmente en todos los servicios de urgen-
aparecen traumatizados hasta el punto de no cias existen instrumentos de cirugía general
tener circulación, deben ser resecados pru- que permitan practicar una sutura adecuada.
dentemente. El lavado, la irrigación y la lim-
pieza con suero fisiológico (SSN) son manio-
bras prioritarias. ELEMENTOS DE SUTURA
Se recomienda usar suturas absorbibles para
ANESTESIA LOCAL la profundidad y no absorbibles para la piel,
delgadas, 5-0 ó 6-0. Sin embargo, si la sutura
Ya limpia la herida, se debe aplicar la aneste- es profunda y requiere mayor esfuerzo de
sia local, preferiblemente lidocaína al 1% ó 2% aproximación, se deben emplear suturas un
con adrenalina (epinefrina) al 1:100.000 ó al poco más gruesas, pero siempre recordando
1:200.000. La inyección debe hacerse a través que las suturas no deben quedar a tensión.
de la piel sana y no a través de la herida, para
evitar llevar a la profundidad las posibles infec- La distancia entre los puntos varía según el
ciones de las superficies cruentas. No es reco- grosor de la piel y según la tensión de los bor-
mendable el uso de lidocaína con epinefrina des, desde 1 mm hasta 4 ó 5 mm. Se comien-
en heridas de los dedos, la punta de la nariz, za la reconstrucción de los tejidos desde los
las orejas o el prepucio, por el riesgo de necro- planos profundos hacia los superficiales. La
sis por vasoconstricción. En estas áreas es me- sutura se hace con puntos separados equidis-
jor usar lidocaína al 1% ó 2% sola (1 mL de lido- tantes. El tejido celular subcutáneo y la grasa
caína al 1% contiene 10 mg de lidocaína HCl). deben afrontarse bien para que la piel no que-
de en tensión.

TÉCNICAS DE SUTURAS Cuando haya que efectuar una resección de


DE LA PIEL la piel en losange debe tenerse cuidado en
que ésta no sea demasiado corta, porque en-
El propósito del cirujano es favorecer el pro- tonces al suturar quedan en cada extremo
ceso natural de cicatrización, mediante bue- abultamientos (“orejas de perro”) que son
na coaptación de los bordes de la herida o de antiestéticos.

175
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MANERA DE RETIRAR UN PUNTO Suturas en párpados. Las heridas de los pár-


DE SUTURA pados, especialmente si hay pérdida de teji-
dos en el párpado superior, pueden dejar ex-
En cirugía plástica, los puntos por lo general puesta la córnea con la grave secuencia de
son muy pequeños y por lo tanto es difícil cor- resequedad, ulceración, perforación y pérdi-
tarlos con tijeras, a menos que éstas sean muy da de la visión.
finas. Primero se hace antisepsia de los pun-
tos, pues se supone que están contaminados La reconstrucción de los párpados es función
por haber estado expuestos. Se halan los cabos del cirujano plástico o del oftalmólogo con
de las suturas hacia la cicatriz, nunca en con- experiencia quirúrgica en este tipo de repara-
tra, para evitar que se produzca dehiscencia. ción. Si hay pérdida de sustancia, el globo ocu-
lar debe protegerse hasta que reciba la aten-
ción del especialista. Esta protección se hace
SUTURAS EN REGIONES para mantener la lubricación permanente de
ESPECIALES la córnea por medio de lágrimas artificiales o
ungüentos oftálmicos. Un simple cono de car-
Aunque los principios generales de las técni- tón con su base sobre la periferia de la órbita
cas de suturas se aplican en cualquier región evita mayor resequedad y ayuda a controlar
del cuerpo, es importante hacer hincapié en el dolor que produce el contacto con el aire.
algunos detalles cuando se trata de zonas Si no hubo pérdida de sustancia, la recons-
especiales. En términos generales, la recons- trucción de una herida de párpados se hace
trucción de las heridas complejas se comien- por planos: conjuntiva (no siempre es indis-
za desde los planos profundos. Si hay lesión pensable suturarla), tarso y piel. Es fundamen-
de estructuras óseas, éstas se reparan prime- tal no dejar que parte alguna de las suturas
ro para dar una base estable a todo el conjun- quede en contacto con la esclerótica y menos
to. Luego se continúa con los otros planos, con la córnea. Ello implica que la sutura debe
siempre de la profundidad hacia la superficie. ser muy delgada, que el nudo quede hacia
En heridas desgarrantes o múltiples de la piel, fuera y que no perfore la conjuntiva.
para comenzar la reconstrucción se busca un
punto anatómico de referencia y se coloca allí Sutura en orejas. El cartílago auricular se
el primer punto de sutura. Tal es el caso, por infecta con mucha facilidad y esto produce su
ejemplo, con el ala nasal o con el reborde reabsorción. La anestesia local ha de ser con
mucocutáneo en los labios. lidocaína sin o con poca concentración de
adrenalina. Todo hematoma debe ser drenado
Suturas en labios. Junto con los párpados, en forma completa. La sutura de las heridas
los labios son la región más móvil de la cara. se hace por planos: piel, cartílago y piel. La
Por esta razón se debe prestar especial aten- sutura del cartílago se realiza con material
ción a la sutura del músculo orbicular, lo cual absorbible 6-0 y la de la piel con suturas sin-
se hace con material absorbible 5-0. La sutura téticas 6-0. Con gasa vaselinada o con gasas
de la piel se comienza con un punto guía en el humedecidas en suero fisiológico, se inmovili-
reborde muco-cutáneo del bermellón. Se usa za de manera cuidadosa el pabellón, rellenan-
material no absorbible 6-0. La mucosa se sutura do todas las anfractuosidades anatómicas. Por
con el mismo material. El apósito de curación último, se coloca un vendaje ligeramente com-
no debe cubrir la parte mucosa o el bermellón, presivo, con buena fijación, para evitar su des-
para evitar su impregnación con comida. plazamiento durante el sueño.

176
CAPÍTULO XII: PRINCIPIOS GENERALES DE SUTURAS EN URGENCIAS

Suturas en nariz. Las suturas en nariz no di- se juntan un poco los dedos, se aprecia
fieren de las del resto de la cara, pero es im- que en cierta dirección se forman en la piel
portante tener en cuenta que cualquier pérdi- surcos más nítidos, los cuales marcan la
da de tejido en las alas nasales deja retrac- dirección de tales líneas.
ción que siempre rompe la simetría nasal. Las d) Su importancia quirúrgica radica en que si
heridas de la nariz se reconstruyen en tres se hace una incisión en la dirección de es-
planos: mucosa o piel endonasal (narinas), tas líneas de menor tensión de la piel, o de
cartílago y piel externa. Si la herida endonasal manera paralela a ellas, la cicatriz es más
es circular, hay tendencia a la retracción. Esto estética y se ensancha menos.
se evita colocando un molde que tenga el diá-
metro y la forma de la fosa nasal y que se
mantiene durante cuatro semanas. CUIDADO POSTOPERATORIO DE
LAS SUTURAS EN PIEL
LÍNEAS DE MENOR TENSIÓN DE La administración de analgésicos se hace de
LA PIEL Y SU IMPORTANCIA EN acuerdo con la gravedad de la lesión. No hay
EL ASPECTO DE LA CICATRIZ consenso sobre el uso de antibióticos si la
herida aparece limpia y es fresca, pero sí se
Un cirujano anatomista vienés, Carl von recomienda si la herida aparece contamina-
Edenberg Langer, en 1861 observó en el ca- da o tiene horas de duración. En este caso,
dáver de un joven que se había suicidado se debe decidir sobre si es conveniente
enterrándose una lezna en el corazón, que el suturarla o mejor dejarla abierta.
orificio de entrada, en vez de ser circular, apa-
recía alargado transversalmente. Esto le lla- La herida se inspecciona de nuevo en el se-
mó poderosamente la atención y como buen gundo o tercer día. Las suturas se retiran antes
anatomista, hizo en cadáveres punciones con del séptimo día. Normalmente, una sutura
lezna y vio cómo el orificio tomaba forma alar- apretada y que dura más de una semana, deja
gada de orientación diferente según la región huellas transversales. Sin embargo, este límite
del organismo. Por ello estas líneas de orien- de una semana es variable. En los párpados,
tación se llaman “líneas de Langer”. los puntos se deben retirar a los cuatro días.

El rostro al envejecer se surca de arrugas que Después de retirar los puntos, la cicatriz se
forman un diseño de líneas cutáneas, que es debe proteger por unos días con esparadrapo
igual en todas las razas. Estas líneas, que quirúrgico. Esto aminora el ensanchamiento
también reciben el nombre de líneas de ex- excesivo de la cicatriz.
presión, líneas de gravedad, de distinción, de
contornos, o mejor líneas de menor tensión Es aconsejable usar cremas protectoras y
de la piel, tienen las siguientes características: antisolares para la cicatriz y jabones ligeramen-
te ácidos. Su aplicación es lógica, pues las ci-
a) Son perpendiculares a la dirección de la catrices no contienen conjuntos pilosebáceos
contracción del músculo subyacente. ni glándulas sudoríparas y, por tanto, no po-
b) Coinciden con las arrugas naturales o son seen capa de grasa protectora. Por otra parte,
paralelas a ellas. las cicatrices se pigmentan con facilidad y es-
c) Se identifican al tornar la piel entre los tas cremas lo evitan. El uso prolongado (va-
pulpejos de los dedos índice y pulgar. Si rios meses) de esparadrapos sobre la cicatriz,

177
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

descolora la zona que cubre el esparadrapo 3. Coiffman, F. Cirugía Plástica, Reconstructiva y


por falta del estímulo de la luz para la función Estética. Segunda. Edicion. Editorial Masson-
de los melanocitos. Pero, por otra parte, el ex- Salvat. Barcelona, 1994.
4. McGregor I. Fundamental Techniques of Plastic
ceso de sol o luz, pigmenta las cicatrices.
Surgery and their surgical applications.10 TH edition.
Churchill Livingstone, Oxford, 2000.
5. Nieto-Cano G . Incisiones y suturas. Editorial
LECTURAS RECOMENDADAS Lerner. Bogotá, 1996.
6. Place, M. Basic Techniques and Principles in
1. Achauer B, Erisksson E. Art and Practice of Plastic Plastic Surgery. En: Grabb and Smith’s Plastic
Surgery: Part I Principles and Techniques and Part Surgery. Editado por W Grabb, H Thorne, S Aston,
II General Reconstructive Surgery. Mosby. St. et al . 5TH edition. Lippincott Williams & Wilkins.
Louis,1998. New York, 1997.
2. Borges, AF. Linear scar revision. En: The art of 7. Preus, S. Plastic Surgery Techniques. En: Plastic
aesthetic plastic surgery. Editado por JR Lewis. Surgery Indications, Operations and Outcomes.
Little Brown. Boston, 1989. Editado por E Erikson. Mosby. St. Louis, 2000.

178
CAPÍTULO XIII: FRACTURAS ABIERTAS EN EL DEPARTAMENTO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIII

Fracturas abiertas en el departamento


de urgencias

Rodrigo Pesántez H, MD
Departamento de Ortopedia y Traumatología
Fundación Santa Fe de Bogotá

GENERALIDADES

L as fracturas abiertas son una emergencia


ortopédica, su frecuencia reportada en
Edimburgo en el Reino Unido entre 1988-1994
ii. Inmunización tétanos.
iii. Alergias.
iv. Farmacológicos.
era de 23 por cada 100000 habitantes por año;
la mayoría de estas en las falanges y la tibia.
EXAMEN FÍSICO
RECONOCIMIENTO DE LA LESIÓN En el examen físico es necesario tener en
cuenta los siguientes aspectos:
La cantidad de energía absorbida por una
extremidad es uno de los factores determinan- 1. Principios ATLS: ABCDE en todo paciente
tes del desenlace en los traumatismos de las traumatizado. En la fase de resucitación la
extremidades (abiertos o cerrados). única atención a las fracturas abiertas es cu-
brirlas para detener el sangrado, su atención
no debe detener la reanimación del paciente.
HISTORIA CLÍNICA 2. Fotografiar o dibujar la lesión.
3. Piel:
a. Mecanismo de la lesión: indica la cantidad • Describir la lesión y examinar la extre-
de energía absorbida por el paciente y su midad en toda su circunferencia.
extremidad. • Observar signos de tatuaje (Heridas por
i. Accidentes de tránsito. arma de fuego) o de las llantas.
ii. Caídas de altura. • Desenguantamiento (“Degloving”) inter-
iii. Isquemia de algún tipo. no: piel laxa, suelta del TCSC (Tejido
iv. HPAF. célular subcutáneo).
v. Lesiones por aplastamiento. • Aplastamiento.
vi. Contaminación. • Flictenas.
vii.Atrapamiento por periodo prolongado. • Excoriaciones.
b. Antecedentes. • Nunca explorar. Una vez revisada cubrir-
i. Patológicos: Diabetes mellitus / Enfer- la con compresa estéril y no destapar
medades debilitantes. sino en salas de cirugía.

179
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Buscar signos de síndrome comparti- • Grado I: herida menor de 1 cm, general-


mental. mente longitudinal y limpia
- Dolor mayor al esperado. • Grado II: laceración mayor de un cm y
- Dolor a extensión pasiva de los dedos. menor de 10 cm, sin pérdidas extensas de
- Compartimentos tensos. tejidos blandos, colgajos o avulsiones. Se
- Hipoestesias o cualquier cambio de sen- puede cubrir el hueso sin necesidad de
sibilidad. colgajos. No hay pérdida de periostio.
- Extremidad edematizada. • Grado III: fracturas segmentarias, lesiones
• Signos de lesión vascular. extensas de tejidos blandos que no cubran
- Disminución o ausencia de pulsos. el hueso, amputaciones traumáticas:
- Disminución del llenado capilar. - IIIA: adecuada cobertura de tejidos blan-
• Signos de lesión neurológica: dos a pesar de tener laceraciones exten-
- Examen comparativo con extremidad sas y colgajos. Conminución severa.
sana HPAF alta velocidad.
- Anotar cualquier diferencia y volver a - IIIB: heridas con contaminación masiva,
evaluar una vez este estabilizada la frac- pérdida de periostio, y exposición ósea
tura que requieren colgajos para su cobertura.
- En fracturas de tibia buscar sensibilidad - IIIC: lesión vascular que requiera repa-
plantar pues este puede ser un dato im- ración para salvar la extremidad.
portante en la decisión de amputar o
salvar la extremidad.
TRATAMIENTO
IMÁGENES DIAGNÓSTICAS La siguiente es la secuencia de tratamiento:

Tomar radiografías a 90° una de la otra AP y 1. Cubrir la lesión con una compresa estéril e
lateral, no girar la parte distal de la extremidad inmovilizar la extremidad. La herida no se
para tomar la lateral, girar la extremidad como descubre sino en salas de cirugía. Si la frac-
un todo. Se buscan las siguientes alteraciones: tura se encuentra severamente contamina-
da, lavar con 1000 cc de solución salina nor-
1. Conminución. mal para remover tierra, pasto, hojas, etc.
2. Fracturas segmentarias. 2. Interconsulta a ortopedia y cirugía plástica.
3. Aire en tejidos blandos. 3. Líquidos intravenosos: de acuerdo a la se-
4. Más de una fractura en la misma veridad de la lesión.
extremidad. 4. Analgésicos IV.
5. Gran desplazamiento de fragmentos. 5. Antibióticos:
a. Cefazolina: 1 g IV cada 8 horas
b. Aminoglucósidos: 5 – 7 mg / kg /día
CLASIFICACIÓN c. Penicilina Cristalina: 5 millones de uni-
dades IV cada 4 horas. Si el paciente
Las fracturas abiertas se clasifican de acuer- es alérgico se utiliza clindamicina. La du-
do a la longitud de la herida de la piel y al ración de la terapia antibiótica depende
grado de contaminación observado en la eva- del grado de severidad de la fractura,
luación inicial. Se recomienda revaluar al fina- en grado I 24-48 horas, en grado II 48-
lizar el desbridamiento: 72 horas y en grado III tres a cinco días.

180
CAPÍTULO XIII: FRACTURAS ABIERTAS EN EL DEPARTAMENTO DE URGENCIAS

6. Profilaxis antitetánica: de acuerdo a la guía 12.NUNCA CERRAR LA HERIDA EN EL PRI-


Tétanos en esta misma serie MER LAVADO.
7. Cultivos: no tomarlos en urgencias. La ob- 13.Cobertura de tejidos blandos en los pri-
tención, aún en salas de cirugía, es cuestio- meros cinco días post trauma.
nada hoy en día, y el estándar es única-
mente solicitarlos en fracturas con signos
de infección. LECTURAS RECOMENDADAS
8. Lavado y desbridamiento URGENTES (pri-
meras 6 horas) en salas de cirugía y esta- 1. American College of Surgeons, Committee on trau-
bilización de la fractura (criterio ortopedis- ma: Advanced Trauma Life Support. 6 Ed.
ta). A continuación se describe la forma de American College of Surgeons. Chicago 1997.
2. Anglen JO, Apostoles S, Christensen G, et al. The
realizar el desbridamiento en cada uno de
efficacy of various irrigation solutions in removing
los planos: slime producing staphyloccocus. J Orthop Trau-
a. Piel y TCSC: primero se debe ampliar ma 1994;8: 390 – 396.
la herida en forma longitudinal. Se rese- 3. Brumback RJ and Jones AL; Interobserver agree-
can los bordes de la herida hasta que ment in the classification of open fractures of the
haya sangrado sub-dérmico apropiado. tibia. The results of survey 245 orthopedic sur-
Si hay duda, dejar el tejido que cubra geons. J Bone Joint Surg 1994; 76A: 1162 – 1166.
estructuras vitales y desbridar en un se- 4. East Practice Management Guidelines Work
Group. Practice Management Guidelines for
gundo tiempo (48 horas). Valorar en
Prophylactic Antibiotic Use in Open Fractures.
conjunto con cirugía plástica. Eastern Association for the Surgery of Trauma
b. Músculo: evaluar las cuatro C, contrac- 2000. Disponible en www.east.org
tilidad, capacidad de sangrado, color y 5. Gustilo RB, Anderson JT. Prevention of infection
consistencia. Incidir la fascia en forma in the treatment of 1025 open fractures of long
longitudinal. Revisar en 48 horas si hay bones. A retrospective and prospective analysis.
dudas. J Bone Joint Surg 1976;58A: 453 – 458.
c. Hueso: remover todos los fragmentos 6. Gustilo RB, Mendoza RM, Williams DN. Problems
in the management of type III (severe) open frac-
sueltos o desvitalizados. Cuidado con
tures. A new classification of type III open fractu-
fragmentos estructurales. res. J Trauma 1984;24:742 – 746.
d. Nervios: no desbridar. 7. Olson Steven A.; Open fractures of the tibial shaft
e. Vasos: no desbridar. – Current treatment. Instructional Course Lecture.
f. Tendones: desbridar el paratendón. J Bone Joint Surg 1996; 78A 1428 – 1437.
9. Lavado con SSN. El uso de antisépticos y 8. Patzakis MJ, Harvey JP and Ivler D. The role of
antibióticos combinados no ha sido mejor antibiotics in the management of open fractures.
que el uso de la SSN sola. La cantidad se J Bone Joint Surg 1974; 56A: 532 – 541.
9. Sanders R, Swiontkowski M, Nunley J and Spiegel
establece de la siguiente forma:
P; The management of fractures with soft tissue
i. Grado I: mínimo 3 litros. disruptions. J Bone Joint Surg;199375A: 778 –
ii. Grado II: 6 Litros. 789.
iii. Grado III: 9 Litros. 10. Weitz-Marshall AD, Bosse MJ. Timing of closure
10.Cambiar de campos, vestidos y guantes. of open fractures. J Am Acad Orthop Surg 2002;
11.Estabilizar la fractura. 10:379-384.

181
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIV

Fracturas cerradas
Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades de Medicina
Bogotá

E n esta guía se revisa la fractura de pelvis


que es la causa más frecuente de morta-
lidad asociada con fracturas cerradas.
El manejo multidisciplinario de este tipo de
traumatismos a permitido reducir la mortalidad,
permitir la movilización precoz, mejorar el ma-
nejo de la vía aérea, disminuyendo las com-
La mayoría se producen por accidentes de plicaciones, aliviando el dolor, disminuyendo
tránsito, atropellos, motociclistas, pacientes los tiempos de hospitalización y mejorando los
proyectados fuera del vehículo y accidentes pronósticos de vida.
de trabajo como caídas de altura, aplastamien-
to por derrumbe o maquinaria pesada. Las causas de muerte en este tipo de trauma
son:
Este tipo de traumatismo destaca entre las • Shock hipovolémico.
causas más comunes e importantes de com- • Falla multiorgánica.
plicaciones y muerte de un paciente politrau- • Sepsis.
matizado. Las fracturas de pelvis ocurren en
aproximadamente 1 a 3% de todas las fractu- Los factores que inciden en la mortalidad:
ras y representan el 2% de los ingresos de • Lesión del complejo posterior.
traumatología en el HJJA. • Paciente con TEC.
• Shock tipo III – IV de difícil manejo.
Frecuentemente son pacientes politraumati- • Anemia aguda.
zados que tienen otras lesiones: • Transfusiones múltiples.

Traumatismo craneanoencéfalico 10%


Otras fracturas 7% ANATOMÍA
Traumatismo urológico 7%
Lesión del plexo lumbosacro 3% El anillo pelviano esta compuesto por tres hue-
Politraumatizado en general 9% sos, dos componentes laterales, el hueso ilia-
co (bilateral) con sus tres partes conocidas,
Los traumatismos de pelvis cerrados tienen pubis, isquium e ilium. El tercer componente
una mortalidad entre 10-20%. En traumatis- es el sacrocoxis, que cierra el anillo por su
mos de pelvis abiertos la mortalidad excede parte posterior. Esta estructura le da una es-
50%. Un impacto frontal a velocidades de 45 tabilidad intrínseca al anillo. Los potentes li-
Km / hora o por lateral de 25 Km/hora, será gamentos que unen este anillo le confieren
suficiente para provocar fractura de pelvis. estabilidad y a su vez flexibilidad y capacidad
de absorción de impactos.

186
CAPÍTULO XIV: FRACTURAS CERRADAS

Anatómicamente la pelvis se relaciona con El complejo posterior corresponde al conjun-


vasos arteriales y venosos que se corren por to de ligamentos más resistentes del cuerpo.
la superficie ósea. El Plexo sacro esta conte-
nido en la pelvis y varios troncos nerviosos se
desplazan por fuera de la pelvis con una intima DIAGNÓSTICO
relación muscular y ósea, contiene además
al recto, la vejiga, la uretra membranosa y los El manejo inicial de todo paciente politraumati-
genitales internos en la mujer. zado incluye el ABCDE del trauma en el mismo
lugar del accidente, conjuntamente con una
La articulación sacro ilíaca (complejo poste- adecuada inmovilización y traslado del pacien-
rior) es el principal soporte posterior y está te a un centro preparado para este tipo de
firmemente reforzada por los ligamentos sa- emergencias.
cro ilíacos anteriores y posteriores, iliolumba-
res, sacrotuberosos y sacroespinosos. A la anamnesis:
Entregada por el paciente o sus acompañan-
La sínfisis pubiana y sus cuatro ramas (com- tes o incluso los testigos, es de vital importan-
plejo anterior) tienen menor importancia en la cia para pensar en pelvis y proceder en con-
estabilidad del anillo. secuencia. Sospechar las lesiones pélvicas en
pacientes inconscientes o que no cooperan.
Esta estructura anatómica y su configuración Brinda una idea grafica de las condiciones en
espacial, le permiten a la pelvis una gran es- el lugar del accidente, el tipo de vehículo, la
tabilidad, algo de elasticidad y le proporciona intensidad de la energía, si hubo algún falle-
además una gran capacidad de absorber im- cido en el lugar, si salió proyectado del vehí-
pactos. Se necesitara una desaceleración de culo, a que altura cayo, sobre que superficie,
25 km/hora por lateral o 45 km/hora por ante- etc. Esto permite tener un alto índice de sos-
roposterior para provocar fracturas pelvianas. pecha del tipo de lesiones que pueden encon-
trarse. Es esencial para el diagnóstico de una
Complejo sacroilíaco permite la transferencia fractura pelviana. Las fracturas de acetábulo
de fuerzas desde el raquis a las extremida- suelen ser producidas por accidentes de alta
des inferiores, para estabilidad pélvica se com- energía en que la fuerza se transmite al acetá-
pone de: bulo en forma indirecta a través de la extremi-
dad inferior. El patrón de la fractura acetabular
Anterior: depende de la posición de la cabeza femoral
Ligamento sacroilíaco anterior. al momento del impacto, la magnitud y la direc-
Ligamento lumbosacro lateral posterior. ción de la fuerza y calidad del tejido óseo del
Ligamento sacroilíaco posterior.‘ paciente. Las lesiones asociadas son simila-
Ligamento iliolumbar. res a los que se producen en fracturas pelvia-
nas, pero además es frecuente la lesión del
Piso Pélvico: nervio ciático. (20%).
Ligamento sacroespinoso, ofrece resistencia
a fuerzas rotatorias externas.
Ligamento sacrotuberoso, ofrece resistencia ESTUDIO RADIOLÓGICO
a fuerzas rotatorias de cizallamiento.
La radiografía simple es la principal herramien-
ta en todo paciente que se sospecha una

187
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

fractura pelviana, por su bajo costo, fácil dis- Avulsión de la apófisis transversa de L5.
ponibilidad y su fácil interpretación. Es de re- Fractura del fémur ipsilateral (cadera flotante).
gla en todo paciente que ha sufrido un trau- Fractura del acetábulo.
ma de alta energía. Sobre el 90% de todas
las fracturas pelvianas pueden ser adecuada- Angiografía: Permite diagnóstico efectivo
mente diagnosticadas con la radiografía sim- exacto y eventual tratamiento con emboliza-
ple. Con una Rx AP podemos no observar la ción de los vasos sangrantes. Del total de
fractura pero es de norma según ATLS. pacientes con fracturas de pelvis solo 7 – 11%
requerirán embolización. En ningún caso se
RX ANTEROPOSTERIOR considera tratamiento definitivo para la hemo-
De urgencia, (perpendicular) informa sobre rragia. El uso de arteriografía con emboliza-
lesiones y desplazamientos del arco anterior ción evita la contaminación del espacio retro-
y posterior. Permite sospechar inestabilidad, peritoneal asociado con la ligadura de los va-
lesiones de columna anterior y fracturas sos sangrantes. Preserva el efecto de tapón
transversas de acetábulo. del espacio retroperitoneal. Sin embargo, la
arteria sangrante es identificada solamente en
RX INLET 10-15% de los pacientes que tienen disrupción
Proyección cefalocaudal a 60º. Permite ver pélvica severa. Es un procedimiento difícil y
estado de la articulación sacroilíaca, despla- no exento de complicaciones.
zamientos anteroposteriores en sacroilíacas
y pubis, arrancamientos óseos en espinas ciá-
ticas, tuberosidad isquiática y sacro, fractura COMPLICACIONES
del sacro y asimetría del anillo pelviano.
Los pacientes que han sufrido fracturas pel-
RX OUTLET vianas de alta energía, frecuentemente se
Proyección caudocefalica a 45º, permite ver acompañan de lesiones del aparato genitouri-
migración superior o inferior de la hemipelvis, nario, intestinales, vasculares y neurológicas
precisar fracturas o diástasis del arco ante- que complican el tratamiento e incrementan
rior, fracturas de sacro (desplazamientos, asi- la morbimortalidad.
metrías de los agujeros sacros y alteración de
las líneas arcuatas), ascenso o fracturas de LESIONES GENITOURINARIAS:
las articulaciones coxofemorales y desplaza- Es la complicación más frecuente 10-15%.
miento cefálico del complejo posterior. Puede variar desde hematuria microscópica
a lesiones de uretra o vejiga y menos frecuen-
Evaluación de inestabilidad pelviana: temente ureterales y renales. La lesión pue-
Diástasis sacroilíaca mayor de 1 cm. de ser causada por traumatismo directo, frag-
Desplazamiento posterior de hemipelvis ma- mentos óseos y fuerzas de tensión o presión
yor a 0,5 cm. que ocurren durante la deformación del anillo
Desplazamiento cefálico de hemipelvis mayor pelviano. Frente a uretrorragia, hematuria
a 0,5 cm. macroscópica, hematoma escrotal o despla-
Diástasis del hueso iliaco o del sacro mayor a zamiento de la próstata al tacto rectal, está
0,5 cm. contraindicado el uso de una sonda Foley ya
Diástasis de la sínfisis pubiana mayor a 2,5 cm. que puede completar una lesión parcial. La
Fractura desplazada del arco posterior. uretrocistografía retrógrada y pielografía
Arrancamiento óseo en la espina ciática. endovenosa nos confirmarán el diagnóstico.

188
CAPÍTULO XIV: FRACTURAS CERRADAS

LESIONES NEUROLÓGICAS: MANEJO


Se ha reportado una frecuencia del 13 al 35%
en las fracturas pelvianas. Existe relación con La conducta será la común a todos los pa-
el compromiso del complejo sacroilíaco pos- cientes politraumatizados, comenzando según
terior, desplazamientos severos y fracturas el protocolo ATLS. (ABCDE).
expuestas. La lesión puede afectar cualquier
nervio del plexo femoral y lumbosacro (L4 a La asociación de lesiones es la responsable de
S4) pero las raíces L5 y S1 son las más fre- la mortalidad. Varias modalidades de tratamiento
cuentemente afectadas. La valoración de la y algoritmos han sido diseñadas para el adecua-
función de los nervios ciáticos, femoral y ob- do diagnóstico y manejo de estos pacientes.
turador debe explorarse en todo paciente con
una fractura pelviana. La lesión más frecuen- La meta fundamental del tratamiento inicial es
te es la neuropraxia producida por contusión la prevención de la muerte precoz producida
o elongación neural. por la hemorragia. Los objetivos del tratamien-
to definitivo no sólo deben ser la sobrevida
FRACTURAS EXPUESTAS DE PELVIS: del paciente y la consolidación de la fractura,
La mortalidad de las fracturas expuestas de sino también la preservación de la función.
pelvis es de 30-50%. Ocurren en menos de Además, se debe evitar el reposo prolongado
5% de todas las fracturas pelvianas. Incluyen en cama para disminuir complicaciones como
comunicación directa con la vagina, recto, úlceras de decúbito, depresión, trombosis
periné u otros sitios de lesión de la piel. El venosa profunda, alteraciones pulmonares y
diagnóstico precoz de una fractura expuesta úlceras de estrés. El objetivo final es la restau-
es esencial y debe determinarse a través del ración de la función y de la anatomía pelvica.
examen físico. Esto es fácil cuando hay lesio-
nes perineales o laceraciones masivas de piel, El trauma complejo de pelvis requiere trata-
pero pequeñas lesiones rectales o vaginales miento agresivo quirúrgico para tejidos blan-
pueden ser difíciles de diagnosticar. dos y huesos intra y extra pélvicos. El manejo
incluye fijación interna y externa, requiere de
HEMORRAGIA: una evaluación cuidadosa del abordaje qui-
Producto de la masiva disrupción de tejidos rúrgico y posición del paciente. No es raro que
blandos o sangramiento del sitio de fractura se tenga que operar con varios equipos qui-
en pacientes con fractura expuesta, son más rúrgicos simultáneos.
difíciles de controlar que las hemorragias aso-
ciadas a fracturas cerradas. El tratamiento del trauma de pelvis compren-
de cuatro puntos importantes a saber: La he-
LESIONES RECTALES Y PERINEALES: morragia, los tejidos blandos, las lesiones
Deben ser tratadas muy agresivamente para asociadas y las fracturas mismas.
prevenir infección. La derivación intestinal ha
probado ser el gesto quirúrgico más impor- La fractura es la mayor fuente de hemorragia,
tante en la disminución de la morbimortalidad por lo que su estabilización tiende a disminuir
asociada a injurias rectales. Derivación total el sangrado. La fijación disminuye el dolor y
con colostomía, drenaje presacro, reparación favorece el manejo en UCI.
rectal y lavado rectosigmoídeo distal profuso.
Fracturas estables: se tratan con métodos
conservadores, reposo en cama por tres a

189
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cuatro semanas y luego deambulación con • Disminuir el volumen pelviano para recupe-
descarga parcial. Analgésicos según necesi- rar el efecto de taponamiento de la pelvis.
dad de cada paciente. • Eliminar el dolor.
• Facilitar el tratamiento de las lesiones aso-
El tratamiento de las fracturas se realizara con ciadas.
fijación externa, fijación interna o ambas. His-
tóricamente el tratamiento fue no quirúrgico y La fijación interna se usa cuando hay inesta-
desde 1970 se han realizado estudios de frac- bilidad posterior de la pelvis, fracturas tipo B1,
turas inestables tratadas quirúrgicamente. A fractura de Ilion, fracturas del complejo pos-
largo plazo las lesiones inestables han pro- terior y fracturas tipo C. Este tipo de fijación
ducido múltiples complicaciones tardías que esta dirigida a corregir el desplazamiento, pre-
incluyen dolor, no unión, mala unión, oblicui- venir la pseudoartrosis y lograr una función
dad pelviana, alteraciones de la marcha, dis- satisfactoria.
crepancia de longitud de las extremidades,
dificultad para sentarse, osificaciones hetero-
tópicas, así como alteraciones neurológicas
persistentes. Se ha determinado que el tiempo LECTURAS RECOMENDADAS
más apropiado para la cirugía definitiva es lo
más pronto posible después del trauma y no 1. Brandes S, Borrelli J Jr. Pelvic fracture and
después de un pobre resultado conservador. associated urologic injuries. World J Surg 2001;
25:1578-87.
La selección del tratamiento se rige por: el 2. Coppola PT, Coppola M. Emergency department
conocimiento de las complicaciones y dificul- evaluation and treatment of pelvic fractures. Emerg
tades de éste, el diagnóstico y grado de ines- Med Clin North Am 2000; 18:1-27.
3. Leggon RE, Wood GC, Indeck MC. Pelvic fractu-
tabilidad de la lesión.
res in pregnancy: factors influencing maternal and
fetal outcomes. J Trauma 2002; 53:796-804.
La fijación externa esta indicada en fracturas 4. Routt ML Jr, Nork SE, Mills WJ. High-energy pelvic
tipo B1, en libro abierto, B2, B3, C, fracturas ring disruptions. Orthop Clin North Am 2002; 33:
expuestas y en inestabilidad hemodinámica. 59-72.
5. Wiss DA. What’s new in orthopaedic trauma. J
Los objetivos de la fijación externa son: Bone Joint Surg Am 2002; 84-A(11):2111-9.
• Comprimir la articulación sacroilíaca y fo-
cos óseos para disminuir el sangrado. Res-
taurar la estabilidad del arco anterior.

190
CAPÍTULO XV: INFECCIONES NECROTIZANTES DE LA PIEL Y DE LOS TEJIDOS BLANDOS

CAPÍTULO XV

Infecciones necrotizantes de la piel


y de los tejidos blandos

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Profesor Honorario de Cirugía, Universidad Nacional de Colombia
Jefe Honorario, Departamento de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá

L as infecciones necrotizantes de la piel y


de los tejidos blandos pueden ser celulitis
o piodermas leves, fácilmente tratables, o
• Infecciones no clostridinanas.
• Infecciones clostridianas, entre las cuales la
gangrena gaseosa es la de mayor gravedad.
fulminates fascitis necrotizantes que represen-
tan un formidable desafío para el cirujano. El hecho de que muchas de las infecciones
necrotizantes no clostridianas son productoras
Las fascitis necrotizantes típicamente son le- de gas lleva a que con frecuencia se diagnos-
siones polimicrobianas de un amplio espectro, tiquen como gangrena gaseosa todas las in-
de gran virulencia y comportamiento extrema- fecciones que se acompañan de crepitación
damente agresivo, lo cual se traduce en una subcutánea en el examen clínico o de la de-
elevada mortalidad. La fascitis necrotizante mostración de gas en radiografías de los teji-
constituye el paradigma de malignidad en dos blandos. La diferenciación es de especial
cuanto a patología, y también el volumen ma- trascendencia, por cuanto la gangrena gaseo-
yor entre todas las infecciones necrotizantes sa implica amputaciones mayores, mientras
de la piel y los tejidos blandos. las fascitis necrotizantes requieren desbrida-
ción amplia.
Las infecciones necrotizantes pueden ser cau-
sadas por agentes únicos, pero con mayor fre- Las mucormicosis conforman un grupo espe-
cuencia son el resultado de infección por una cial de fascitis necrotizantes. Son causadas
variedad de microorganismos, Gram-positivos por hongos, zigomicetos (anteriormente deno-
y Gram-negativos, aerobios y anaerobios, los minados ficomicetos), que producen un cua-
cuales usualmente están presentes en aso- dro fulminante de gangrena tisular progresi-
ciación sinergística y producen grave lesión va, altamente letal, difícil de diferenciar de las
tisular, con gangrena progresiva y profunda fascitis necrotizantes de tipo polibacteriano.
toxicidad sistémica. También pueden ser cau-
sadas por hongos, virus y micobacterias Históricamente se debe recordar el trabajo
atípicas. pionero de F.L. Meleney, quien en las prime-
ras décadas del presente siglo, describió las
Para efectos prácticos, estas infecciones infecciones gangrenosas por estreptococos
necrotizantes pueden ser subdivididas en dos beta hemolíticos y por sinergia bacteriana. Hoy
grandes grupos: todavía muchos las denominan “gangrena de
Meleney” o “infección sinérgica de Meleney”.

187
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las infecciones necrotizantes del periné mas- TIPOS DE INFECCIÓN


culino se conocen como síndrome o enferme- NECROTIZANTE
dad de Fournier. En las mujeres puede haber
un cuadro similar, especialmente a partir de Celulitis. Es la infección que afecta solamente
infecciones de la glándula de Bartholin. la piel (y en parte menor el tejido subcutáneo).

La “fascitis necrotizante” es un proceso in- Las celulitis son entidades típicamente mono-
feccioso y necrótico, rápidamente progresivo, microbianas, usualmente producidas por es-
que afecta y erosiona masivamente el tejido treptococos aeróbicos, otros cocos Gram po-
subcutáneo y sus fascias de Camper y Scarpa. sitivos, bacilos coliformes aeróbicos y clos-
Generalmente no afecta la fascia muscular tridios. El Hemophilus influenzae puede pro-
profunda, lo cual explica la confusión que ha ducir una forma de celulitis necrotizante que
existido con el término. El cuadro patológico afecta principalmente a los niños.
se acompaña de extrema toxicidad.
El tratamiento de la celulitis se hace preferen-
La fascitis necrotizante ocurre con mayor fre- temente con altas dosis de penicilina. El des-
cuencia en las extremidades inferiores, pero bridamiento operatorio generalmente no es
se presenta en cualquier región anatómica, necesario, aunque en ocasiones está indica-
incluyendo la cara y el cuero cabelludo. Aun- da la incisión de la piel para disminuir tensión
que la patogénesis de la fascitis necrotizante y prevenir la necrosis.
no es totalmente conocida, el curso rápida-
mente invasor y destructor hace pensar que Fascitis necrotizantes. Son las infecciones
el proceso se deba, en gran parte, a simbio- muy agresivas de etiología polimicrobiana que
sis y sinergia multibacteriana. afectan al tejido subcutáneo y sus fascias de
Camper y Scarpa.
Las infecciones necrotizantes tienden a ocu-
rrir en huéspedes inmunocomprometidos, de Mionecrosis. Es la gangrena gaseosa, enti-
enfermedad avanzada, extremadamente obe- dad de alta mortalidad que resulta de una in-
sos, con enfermedades degenerativas y de- fección anaeróbica del músculo, generalmente
bilitantes, con diabetes o enfermedad vascu- secundaria a trauma o a operaciones sobre
lar, con neoplasias, o en pacientes que han el intestino. Se acompaña de tremenda toxi-
sufrido trauma o han sido sometidos a opera- cidad sistémica, con fenómenos tales como
ciones sobre los tractos gastrointestinal y ge- coagulación diseminada intravascular, he-
nital. Sin embargo, también se presentan en mólisis e hipocalcemia. Los microoorganismos
personas sin antecedentes patológicos con causantes son los clostridios.
trauma mínimo abierto o trauma por contusión,
después de inyecciones hipodérmicas o aun Infección necrotizante por estreptoco A
después de operaciones limpias-contamina- ßhemolítico. En los últimos dos decenios se
das o limpias. registran, en diversos países, severas infec-
ciones necrotizantes causada por cepas ultra-
Sólo el diagnóstico precoz y una intervención virulentas del estreptococo A, que la prensa
quirúrgica radical de urgencia, junto con un ha denominado “la bacteria devoradora de
excelente soporte de la función orgánica en hombres” o la “bacteria devoradora de carne”,
una buena unidad de cuidado intensivo, pue- una grave entidad con tasas de mortalidad del
den salvar la vida del enfermo. orden del 30%.

188
CAPÍTULO XV: INFECCIONES NECROTIZANTES DE LA PIEL Y DE LOS TEJIDOS BLANDOS

CLASIFICACIÓN • Gangrena estreptocóccica.


• Fascitis necrotizante.
Muchas clasificaciones de las infecciones ne- • Mionecrosis clostridiana o gangrena gaseosa.
crotizantes han sido propuestas, lo cual ha
sido no solo motivo de confusión sino también, Algunos proponen separarlas sólo en dos
lo más grave, de demoras en el tratamiento grandes grupos:
mientras se trata de ubicar la entidad en uno
de los grupos. Generalmente se aceptan las • No clostridianas
siguientes categorías: • Clostridianas

• Gangrena bacteriana sinergística o gangre- Existe una tendencia hacia la agrupación de


na de Meleney (Estreptococo microaero- estos síndromes en una categoría única, la
fílico + S. aureus o Proteus). de las infecciones necrotizantes progresi-
• Celulitis sinergística necrotizante. vas o fascitis necrotizantes, término que en
• Celulitis crepitante no clostridiana. la actualidad presupone una infección bacte-
• Fascitis necrotizante. riana mixta, reconociendo un común denomi-
• Pioderma estafilocóccica, celulitis e infec- nador en cuanto a su etiología y factores pre-
ciones estafilocóccicas de la herida. disponentes.
• Pioderma estreptocóccica o impétigo,
erisipela, celulitis, úlceras y gangrenas, e Ninguno de los signos clínicos, ni la necrosis,
infecciones estreptocóccicas de la herida. ni la presencia de gas ni la crepitación en los
• Pioderma gangrenosum (por flora polimi- tejidos, son patognomónicos de los diferentes
crobiana). tipos de infección necrotizante de los tejidos
• Gangrena gaseosa (clostridiana). blandos. Por ello en presencia de una infec-
• Mucormicosis cutánea necrotizante. ción severa que haga sospechar fascitis necro-
tizante se debe emprender la biopsia tisular
En la práctica clínica la mayoría de los médi- urgente (congelación) para establecer el diag-
cos establece distinción sólo entre cuatro gran- nóstico y emprender sin demora el tratamiento.
des grupos, los cuales corresponden realmen-
te a cuatro síndromes clínicos principales: En su capítulo sobre infecciones necrotizantes
en el texto del American College of Surgeons
• Celulitis necrotizante sinérgica o gangrena (ACS Surgery, WebMD Corporation, New York
de Meleney. 2001) Lewis presenta la siguiente clasificación:

189
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. CLASIFICACIÓN Y CARACTERÍSTICAS DE LAS INFECCIONES NECROTIZANTES DIFUSAS.


SEGÚN F.T. LEWIS, SOFT TISSUE INFECTION. EN: ACS SURGERY. AMERICAN COLLEGE OF SURGEONS.
WEBMD CORPORATION, NEW YORK, 2002. PAGE 323.

Tipo Caraterísticas
Clostridiana
Celulitis necrotizante Signos locales tempranos, dolor moderado, afección de tejidos superficia-
les (piel y tejido subcutáneo
Mionecrosis Signos sistémicos precoces, dolor severo, afección de los tejidos profun-
dos (primordialmente el músculo)
No clostridiana
Celulitis necrotizante Comienzo rápido (1-3 días), microorganismo único afección de tejidos
monomicrobiana superficiales (piel y tejido subcutáneo)
Gangrena estreptotocóccica
Infecciones necrotizantes por Vibrio
Fascitis necrotizante Comienzo más lento (4-7 días), sinergia bacteriana, actividad anaeróbica,
afección de tejidos profundos (fascia de Scarpa)
Celulitis sinergística necrotizante Comienzo más lento (5-10 días), sinergismo bacteriano,
por bacterias gram negativas Afección de las capas más profundas (fascia profunda y posiblemente
músculo

ETIOLOGÍA La gangrena tisular también puede ser pro-


ducida por zigomicetos (o ficomicetos), que
La etiología de las fascitis necrotizantes es son hongos del género Mucor. El cuadro clí-
una infección polimicrobiana en la cual parti- nico es difícil de diferenciar de las fascitis ne-
cipa una amplia variedad de microorganismos crotizantes de etiología polibacteriana.
(cocos Gram positivos y bacilos Gram negati-
vos, aeróbicos y anaeróbicos) que ejercen una
acción sinérgica de gran virulencia. General- PATOLOGÍA
mente se aíslan estreptococos y estafilococos,
bacterias entéricas Gram negativas (enteroco- La característica que diferencia las fascitis
cos) y bacteroides; también se han reportado necrotizantes es la necrosis y destrucción de
infecciones por especies de vibrios marinos. los tejidos subcutáneos y de la fascia superfi-
cial (fascias de Camper y Scarpa). Este agre-
En los estudios bacteriológicos se pueden sivo fenómeno resulta en erosión de la grasa
identificar clostridios, lo cual no necesariamen- por debajo de la piel, la cual aparece sorpren-
te señala que se trata de una gangrena gaseo- dentemente preservada en las etapas iniciales
sa, puesto que éstos pueden aparecer simple- del proceso. La fascia muscular y el músculo
mente como microorganismos contaminantes. no resultan afectados.
La verdadera gangrena gaseosa, o mionecro-
sis clostridiana, se caracteriza por la invasión La biopsia por congelación, que debe ser de
destructora del músculo por clostridios. tipo incisional para que incluya no solo la fascia
subcutánea sino también la fascia muscular y
el músculo, permite establecer el diagnóstico

190
CAPÍTULO XV: INFECCIONES NECROTIZANTES DE LA PIEL Y DE LOS TEJIDOS BLANDOS

precoz, en tal forma que se pueda emprender ma no penetrante. Es de creciente prevalen-


de inmediato el tratamiento quirúrgico radical. cia en drogadictos que utilizan jeringas infec-
La biopsia también es de gran utilidad para tadas.
diferenciar una infección bacteriana de una
mucormicosis. Pero las biopsias no deben La edad avanzada, la obesidad, la insuficien-
causar demoras indebidas. El mejor diagnós- cia vascular, las neoplasias malignas, las que-
tico lo establece el cirujano en el quirófano. maduras, la inmunodepresión, favorecen el
desarrollo del proceso. Se ha descrito después
En el corte histológico se observa infiltración de operaciones sobre el intestino, como com-
polimorfonuclear, trombosis de los vasos, mi- plicaciones de incisiones cercanas a colosto-
croabscesos y la presencia de microorga- mías e ileostomías y también como complica-
nismos. ción de operaciones limpias tales como
herniorrafias.
Las alteraciones histopatológicas específicas
de las fascitis necrotizantes que aparecen en La alteración típica es la progresiva excava-
el corte por congelación son los siguientes: ción subcutánea por la necrosis de la fascia
superficial y de los tejidos blandos, mientras
1. Necrosis de la fascia superficial. la piel aparece preservada. Este hallazgo de
2. Infiltración polimorfonuclear de la dermis piel de apariencia normal o algo enrojecida
profunda y de la fascia. lleva a que la lesión permanezca desapercibi-
3. Trombos fibrinosos de las arterias y venas da y a un diagnóstico tardío. La excavación
que atraviesan la fascia. subcutánea permite que una pinza de disec-
4. Vasculitis con necrosis fibrinoide de las ción se deslice bajo lapiel sin dolor para el
paredes de arterias y venas paciente. Se presenta edema, pero es carac-
5. Presencia de microoorganismos en las terística la ausencia de linfangitis y linfadenitis.
destruidas fascia y dermis en un espéci- La presencia de gas en los tejidos puede ser
men tisular coloreado con Gram. detectada por crepitación, que está presente
6. Preservación del músculo. en 25% de los casos, y también mediante ra-
diografías simple o TAC de los tejidos blan-
Una vez que el proceso necrotizante se extien- dos, lo cual ocurre en 90% de los casos. La
de para afectar a la totalidad de los tejidos presencia de gas, de por sí, no significa una
blandos, incluyendo la piel, se hace histológi- gangrena gaseosa, por cuanto son múltiples
camente indistinguible de otros proceso los microorganismos capaces de producir gas.
necrotizantes.
Las imágenes por resonancia magnética son
de gran utilidad para demostrar las coleccio-
DIAGNÓSTICO Y ASPECTOS CLÍNICOS nes de líquido y la interfaz del músculo y la
fascia en áreas de necrosis, con lo cual se
La infección necrotizante puede ocurrir en puede categorizar el tipo de lesión (cellulitis,
cualquier grupo de edad. Es más frecuente fascitis necrotizante, piomiositis) y definir la
en casos de heridas graves y contaminadas, conducta quirúrgica adecuada..
pero puede ser consecuencia de trauma me-
nor (excoriaciones, abrasiones o laceraciones El diagnóstico precoz, que permite el trata-
mínimas, picaduras de insectos), de la apli- miento urgente e inmediato, es la clave para
cación de inyecciones o de contusiones y trau- lograr la supervivencia. Los tejidos necróticos,

191
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

exudados y líquidos aspirados de la región péutica adecuada. Los nuevos agentes antimi-
afectada deben ser examinados de inmedia- cóticos pueden probar ser de mayor eficacia;
to en frotis coloreados con Gram y se deben el fluconazol ha sido utilizado en pacientes con
tomar cultivos para aerobios y anaerobios. mucormicosis pulmonar.

Realizada la desbridación radical inicial de una


TRATAMIENTO fascitis necotizante, el paciente es mantenido
bajo completa monitoría y soporte fisiológico
La clave para la supervivencia de un paciente y metabólico, y es llevado a las salas de ciru-
con fascitis necrotizante es la resección o gía para revisión programada (second look) a
desbridación amplia y completa de todos los las 24 horas, y luego para desbridaciones
tejidos afectados, procedimiento que se debe secuenciales bajo anestesia general, con el
efectuar con carácter de urgencia y sin consi- fin de detectar y eliminar focos residuales que
deraciones estéticas, por cuanto se trata de puedan reiniciar el proceso.
un problema de vida o muerte.

El cubrimiento antibiótico de amplio espectro LECTURAS RECOMENDADAS


se hace desde el comienzo. Inicialmente está
indicado el régimen triple (“PCG”) orientado 1. Andreasen TJ, Green SD, Childers BJ. Massive
al control de los diversos agentes microbianos: infectious soft-tissue injury: diagnosis and
management of necrotizing fasciitis and purpura
fulminans. Plast Reconstr Surg 2001; 107:1025-
• Penicilina (o ampicilina) para clostridios,
1034.
enterococos y pepto-estreptococos, en 2. Elliot D, Kufera JA, Myers RA. The microbiology
dosis de 3 millones de unidades de penici- of necrotizing soft tissue infections. Am J Surg
lina G cada 4 horas. 2000; 361-366.
• Clindamicina (o metronidazol o cloranfe- 3. Freishlag JA, Ajalt G, Bussuttil RM. The treatment
nicol) para los anaerobios, B. fragilis y of necrotizing soft tissue infections. The need for
peptoestreptococos, en dosis de 600 mg a new approach. Am J Surg 1985: 149:751-755.
de clindamicina cada 6 horas. 4. Giuliano A, Lewis F Jr, Hadley K, Blaisdell FW.
Bacteriology of necrotizing fasciitis. Am J Surg
• Gentamicina (u otro aminoglucósido) para
1977: 134:52-.
enterobacteriáceas y toda la variedad de 5. Janevicius, R.A., Han S-H., Batt, M.D. Necrotizing
Gram negativos, en dosis de 1,5 mg/kg fasciitis (Collective rewiew). Surg. Gynecol. Obstet.
cada 8 horas. 1982; 154: 97-102.
6. Lewis RT. Soft tissue infections. World J Surg
El imipenem puede ser utilizado como anti- 1998; 22:146-151.
biótico único, en dosis de 1 g IV cada 6 horas. 7. Lewis RT. Soft tissue infection. En: ACS Surgery.
Principles and Practice. DW Wilmore, LY Cheung,
AH Harken, JH Holcroft, JL Meakins, NJ Soper
También puede utilizarse una cefalosporina de
(Editors). American College of Surgeons. WebMD
tercera generación o ciprofloxacina más un Corporation. New York, 2002.
agente anti-anaeróbico. 8. Losanoff JE, Metzler MH, Richman BW, et al.
Necrotizing chest wall infection after blunt trauma:
En los pacientes con mucormicosis, que tie- case report and review of the literature. J Trauma
nen un pronóstico reservado, la anfotericina 2002; 53:787-789.
B ha sido el agente de preferencia, pero no 9. Meleney, F.L. Hemolytic streptococcus gangrene.
todos los pacientes exhiben respuesta tera- Arch Surg 1924; 9:317.

192
CAPÍTULO XV: INFECCIONES NECROTIZANTES DE LA PIEL Y DE LOS TEJIDOS BLANDOS

10. Meleney FL. Differential diagnosis between certain 14. Patiño JF, Castro D. Necrotizing lesions of soft
types of infectious gangrene of the skin. Surg tissues. A review. World J Surg 1991; 15:235-239.
Gynecol Obstet 1933; 56:847-867. 15. Patiño JF, Castro D, Valencia A, Morales P.
11. Patiño JF, Mora R, Guzmán MA, Rodríguez Fran- Necrotic soft tissue lesions after a volcanic
co E. Mucormycosis: a fatal case by Saksenaea cataclysm. World J Surg 1991; 15:240-247.
vasiformis. World J Surg 1984; 8:419-422. 16. Patiño JF. Infecciones necrotizantes de la piel y
12. Patiño JF. Infecciones necrotizantes de tejidos los tejidos blandos. En: Lecciones de Cirugía. Por
blandos. La experiencia con los heridos en el ca- JF Patiño. Editorial Médica Panamericana. Bue-
taclismo volcánico de Armero, Colombia. En: In- nos Aires, Bogotá, 2001.
fección Quirúrgica. Editado por J.F. Patiño. Fun- 17. Pruitt BA Jr. Biopsy diagnosis of surgical infections.
dación Santa Fe de Bogotá. Bogotá, 1989. N Engl J Med 1984; 310:1737-1738.
13. Patiño JF. Infección por mucormicosis. En: Infec- 18. Stamnkovic I, Lew PD. Early recognition of
ción Quirúrgica. Editado por J.F. Patiño. Funda- potentially fatal necrotizing fasciitis: the use of
ción Santa Fe de Bogotá. Bogotá, 1989. frozen-section biopsy. N Engl J Med 1984:
310:1689-1693.

193
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVI

Lesiones de las vías biliares

Jaime De la Hoz, MD
Profesor Honorario de Cirugía
Universidad Nacional de Colombia

A los servicios de urgencias concurren pa-


cientes con complicaciones derivadas de
lesiones de las vías biliares, por trauma acci-
En caso de trauma externo, abierto o cerra-
do, existen dos presentaciones para estable-
cer el diagnóstico: una, cuando en la laparo-
dental o de carácter iatrogénico. La presenta- tomía se observa presencia de bilis en la ca-
ción puede ser por biliomas o peritonitis biliar, vidad peritoneal, lo cual obliga a explorar la
colangitis aguda, escapes biliares o cuadros vía biliar o, ante la duda, efectuar una colangio-
tardíos de cirrosis. grafía intraoperatoria por punción; la segun-
da presentación temprana es la de fuga de
Las lesiones de las vías biliares suceden por bilis desde el conducto biliar lesionado a tra-
trauma abdominal externo, penetrante o ce- vés de los drenes dejados durante la opera-
rrado o, más frecuentemente, durante la cole- ción o por la herida, o más tardíamente, por la
cistectomía. También ocurren cuando se ex- aparición de ictericia y pruebas de función he-
plora el colédoco o en el curso de otras ope- pática progresivamente anormales, en parti-
raciones que se efectúan sobre la parte alta cular la bilirrubina total y la fosfatasa alcalina.
del abdomen, como gastrectomía, procedi-
mientos sobre el hígado o el páncreas o en Se dispone de muchos instrumentos para es-
las derivaciones portocava. La lesión iatrogé- tablecer las posibles causas del problema
nica se acompaña de estrechez (o estenosis) postoperatorio: colangiografía intraoperatoria,
de estos ductos, que si no se reconoce o se colangiopancrea-tografía endoscópica retró-
trata de manera oportuna y técnicamente ade- grada (CPRE), colangiografía transhepática
cuada, se desarrollan complicaciones que percutánea, imagenología biliar con radionúcli-
amenazan la vida, como colangitis, cirrosis do, tomografía axial computadorizada (TAC),
biliar o hipertensión portal. colangiorresonancia y ultrasonografía, estu-
dios que tienen indicaciones y valores dife-
La naturaleza y las consecuencias de estas rentes.
lesiones después de colecistectomía, varían
en enorme grado. Pueden ir desde una peque-
ña acumulación postoperatoria de líquido que FACTORES CAUSALES
contiene bilis, con secuelas clínicas leves o
nulas, hasta estrecheces extra o intra hepáti- Variaciones anatómicas. La lesión de los
cas que acaban por tornarse resistentes al tra- conductos biliares ocurre frecuentemente
tamiento intervencionista y pueden requerir cuando existen anomalías anatómicas del ár-
trasplante hepático. bol biliar o de la vascularización arterial.

194
CAPÍTULO XVI: LESIONES DE LAS VÍAS BILIARES

Hemostasia. Cuando ocurre hemorragia du- de que no se puede controlar de manera preci-
rante la disección, se puede cometer el error sa la profundidad de la penetración de la ener-
de aplicar ciegamente pinzas hemostásicas, gía térmica en los tejidos circundantes y de la
grapas o puntos de sutura, o el uso de electro- variable conductividad por los tejidos según su
cauterio. contenido de agua y otras propiedades físicas.

Isquemia ductal. La microcirculación del ár- Fuga de bilis. Muchas son de naturaleza sub-
bol biliar extrahepático ha sido estudiada por clínica. Se presentan hasta en 25% de los pa-
Northover y Terblanche. Según estos autores, cientes después de colecistectomía, pero gran
el suministro sanguíneo del canal principal bi- parte de ellas carecen de importancia clínica.
liar corre por tres columnas, una posterior y La fuga de bilis se califica importante cuando
dos laterales. Se ha sugerido que el daño de da como resultado fístulas biliares prolonga-
estos vasos puede resultar en isquemia o es- das, biliomas, ascitis o peritonitis biliar.
tenosis del conducto. En la sección transver-
sal del canal se presentan alteraciones en su La acumulación libre de bilis en la cavidad peri-
irrigación, especialmente en el flujo arterial que toneal resulta en ascitis biliar o peritonitis, dife-
proviene de su extremo inferior. La isquemia rencia que depende de la presencia de bacte-
que ocurre al seccionar el extremo superior rias. La acumulación localizada puede produ-
del ducto, indudablemente es responsable de cir un bilioma estéril o un absceso subhepático
la notable cicatrización y retracción de la es-
o subdiafragmático.
trechez hacia el hilio y su interior, un fenóme-
no de frecuente observación.

Patología peligrosa. Colecistitis aguda, cole- TIPOS DE LESIONES DE LAS VÍAS


cistitis gangrenosa, colecistitis perforada, en- BILIARES
fermedad poliquística y cirrosis hepática son
todas entidades que ofrecen un campo opera- Los tres tipos principales de lesión de los con-
torio de riesgo. También lo son las úlceras duo- ductos biliares son:
denales penetrantes, que pueden deformar las • Herida
relaciones entre el colédoco, el duodeno y el • Sección transversal
páncreas. La movilización del duodeno para • Resección de un segmento
el cierre del muñón duodenal, puede producir
de manera inadvertida, lesión del conducto Ocurren en el conducto cístico, el conducto
biliar. Las pancreatitis aguda y crónica y los biliar extrahepático, los conductos intra hepáti-
tumores no ductales representan un peligro cos o las raíces de estos conductos. La grave-
potencial en cuanto a lesión de la porción intra- dad de la lesión depende no sólo de su tipo,
pancreática del colédoco. sino también del retraso para reconocerla y
de los intentos iniciales para tratar el proble-
Lesiones por retracción. La retracción exce- ma. Cada una de ellas puede dar lugar a abs-
siva de la vesícula biliar puede ser tan peligro- cesos y flegmones pericolecísticos.
sa como la retracción insuficiente: puede pro-
ducir arrancamiento de conductos císticos frá-
giles o de vasos pequeños. FÍSTULAS BILIARES INTERNAS
Lesiones térmicas. La preocupación principal No es raro observar algunas comunicaciones
cuando se utiliza el electrocauterio se deriva fistulosas entre la vesícula y órganos vecinos

195
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

y se cree que tales fístulas aparecen por ne- se acompaña de ictericia progresiva y dilata-
crosis a presión de la pared de la vesícula de- ción de los conductos. La reparación tempra-
bida a grandes cálculos. El ejemplo clásico na es preferible en individuos físicamente ap-
es el íleo por colelitiasis, en el cual el problema tos. Diferir la operación expone al riesgo de
de presentación es la obstrucción intestinal. constante colangitis, la cual puede transformar
El síndrome de Mirizzi es otro ejemplo, cuando una técnica planeada en un procedimiento de
el cálculo de la vesícula o del cístico presiona urgencia. La fístula biliar externa crónica con-
el colédoco produciendo ictericia. lleva secuelas nutricionales y de alteración del
equilibrio de líquidos y electrolitos. Incluso, la
El cuadro de íleo biliar es uno de obstrucción obstrucción biliar de poca monta puede pro-
intestinal, con sus correspondientes manifes- ducir cirrosis biliar irreversible con el transcur-
taciones clínicas e imagenológicas. Si el cál- so del tiempo.
culo es radioopaco, puede ser visualizado en
la radiografía simple de abdomen. El paciente que llega a urgencias con una fís-
tula biliar debe ser referido a un cirujano ex-
perto para estudio y reparación, la cual usual-
LESIONES DUCTALES DE mente es precedida de un régimen de soporte
metabólico y nutricional. La técnica quirúrgica
PRESENTACIÓN EN EL indicada en casos de estenosis biliar es la
POSTOPERATORIO TEMPRANO hepático-yeyunostomía.

Las lesiones que aparecen en el postopera- La colangiopancreatografía retrógrada endos-


torio temprano, asumen varias formas de pre- cópica es de importancia extrema en la evalua-
sentación. El corte completo y la ligadura del ción de la lesión. En ocasiones la colocación
conducto, culminan en ictericia en término de de un stent o férula transampular consigue
días. En otros pacientes hay corte pero no li- controlar el escape biliar.
gadura de la porción proximal del conducto.
La bilis se derrama libremente en la cavidad La colangiografía transhepática percutánea es
peritoneal y causa peritonitis o puede salir por de utilidad para el cirujano debido a que señala
el sitio de la incisión y producir una fístula bi- el conducto biliar proximal para ser usado en
liar externa, y el paciente no presenta icteri- el reparo.
cia pero sí acolia.
La colangiorresonancia magnética, más re-
En caso de obstrucción parcial del conducto o cientemente ha demostrado con exactitud la
si existe infección, el cuadro inicial generalmen- causa y nivel de la obstrucción biliar.
te es de colangitis o de sepsis abdominal. En tal
caso, si hay ictericia postoperatoria, ésta puede Aunque muchas de las complicaciones tardías
deberse a un cálculo residual en el colédoco. de las fístulas biliares pueden ser tratadas por
radiología intervencionista, la manipulación
transhepática no es fácil y está pronta a com-
LA FÍSTULA BILIAR plicaciones. La tendencia es hacia la repara-
ción quirúrgica definitiva mediante hepático-
Con el tiempo, las fístulas comienzan un pro- yeyunostomía.
ceso de cierre espontáneo, que usualmente

196
CAPÍTULO XVI: LESIONES DE LAS VÍAS BILIARES

LECTURAS RECOMENDADAS 8. Hutson DL, Russell E, Yrizarry J, et al: Percu-


taneous dilatation of biliary strictures trough the
1. Bismuth H. Postoperative strictures of the bile duct. afferent limb of a modified Roux–en-Y choledo-
En: The Biliary Tract. Editado por LH Blumgart. chojejunostomy or hepaticojejunostomy. Am J Surg
Churchill Livingstone. Edinburgh, 1982. 1998; 175:108-113.
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syndrome and cholecystobiliary fistula: A unifying 1182.
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5. Davidoff AM, Pappas TN, Murray EA, et al: Mecha- benign strictures of the biliary tract. World J Surg
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197
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVII

Shock hemorrágico

Fernando Arias Amézquita, MD.


Departamento de Cirugía Fundación Santa Fe de Bogotá.

DEFINICIÓN:
SÍNTOMAS Y SIGNOS INICIALES

S hock se define como una anomalía circu-


latoria que da lugar a perfusión orgánica
inadecuada y a falta de oxigenación tisular.
En general, los signos de vasoconstricción cu-
tánea como palidez, frialdad y lentificación del
llenado capilar ayudan a determinar la presen-
Su identificación y diagnóstico puede ser difícil cia de shock: son consecuencia de la libera-
y siempre debe sospecharse en el trauma. Sin ción de catecolaminas y de la redistribución
embargo algunos signos y síntomas clínicos del flujo sanguíneo a otros órganos vitales.
son muy útiles en el servicio de urgencias para También se pueden encontrar otras alteracio-
iniciar terapia temprana y agresiva en estos nes como taquipnea, alteraciones del estado
pacientes. Uno de los primeros signos es la mental como agitación o depresión del esta-
taquicardia, considerando la edad del pacien- do de conciencia. Para el manejo inicial, siem-
te, debido a que la frecuencia cardíaca varía pre se debe pensar que los cambios senso-
según los grupos etáreos. También depende riales son secundarios a la alteración de la
de si el individuo está tomando medicamentos perfusión tisular, pero hay también que des-
que influyan sobre la respuesta cardiovascu- cartar otras causas, como intoxicación exóge-
lar, como betabloqueadores, calcioantagonis- na o alteraciones psiquiátricas de base.
tas, etc. Luego de haber diagnosticado y cla-
sificado la pérdida sanguínea, es importante La oliguria (diuresis < 0,5 mL/kg) es un signo
tratar de establecer la etiología del shock. En fácilmente identificable y que debe ser monito-
la mayoría de los casos la causa es hipovole- rizado constantemente. La presencia de acido-
mia. Sin embargo existen otras causas, como sis metabólica también se considera de gran
el shock cardiogénico, que ocurre en los pa- importancia en el diagnóstico del shock.
cientes con patología cardiovascular previa o
trauma cardíaco. También se debe tener en
cuenta el shock neurogénico, secundario a la FISIOPATOLOGÍA
pérdida del control vasomotor, pero que no es
consecuencia de trauma cráneo-encefálico El sistema cardiovascular inicialmente respon-
(TCE) aislado. El shock séptico es infrecuen- de al shock hipovolémico con incremento de
te en los pacientes traumatizados que acuden la frecuencia cardíaca, aumento de la contrac-
tempranamente a los servicios de urgencias. tilidad miocárdica y vasoconstricción periféri-
Otras causas muy importantes de shock en ca. Esta respuesta ocurre por liberación dra-
esos pacientes son el neumotórax a tensión y mática de norepinefrina y disminución del tono
el taponamiento cardíaco. vagal (regulado por baroreceptores en el arco

202
CAPÍTULO XVII: SHOCK HEMORRÁGICO

carotídeo, aurícula izquierda, arco aórtico y EVALUACIÓN DE LA PÉRDIDA


los vasos pulmonares). El sistema cardiovas- DE VOLUMEN
cular redistribuye el flujo sanguíneo al cere-
bro, corazón y riñón con disminución del mis- El Colegio Americano de Cirujanos ha clasifi-
mo en la piel, el músculo y el tracto gastroin- cado la pérdida sanguínea en cuatro grupos,
testinal. que tienen características especiales e impli-
caciones en el tratamiento.
El sistema renal se adapta al shock hemorrá-
gico con incremento de la secreción de renina • En la hemorragia grado 1 los pacientes se
en el aparato yuxtaglomerular. La renina con- asimilan al donante electivo de sangre,
vierte el angiotensinógeno en angiotensina I, cuya pérdida usualmente no requiere res-
que a su vez es transformada a angiotensina titución.
II por los pulmones y el hígado. Esta tiene dos • En la hemorragia grado 2, el hallazgo prin-
efectos principales: vasoconstricción del mús- cipal es la disminución en la presión de pul-
culo liso arteriolar y estimulación de la aldoste- so. La presión de pulso es la diferencia
rona en la corteza adrenal. La aldosterona es entre la presión arterial sistólica (PAS) y la
responsable de la reabsorción activa de sodio diastólica.
y la subsecuente conservación de agua. • En la hemorragia grado 3 el hallazgo fun-
damental es la disminución de la PAS. Por
El sistema neuroendocrino produce incremen- ello la hipotensión registrada en el manguito
to en la hormona antidurética (ADH) circulante, durante la evaluación inicial de los pacien-
la cual es liberada en la hipófisis posterior co- tes es considerada como un signo tardío,
mo respuesta a la disminución de la presión pues solo se manifiesta con una pérdida
arterial detectada por baroreceptores y a la de 1500-2000 centímetros cúbicos (30-40%
disminución de la concentración de sodio de- del volumen sanguíneo). En este grado de
tectada por osmoreceptores. hemorragia, el paciente con hipotensión
sistólica con seguridad va a requerir trans-
El sistema hematológico activa la cascada de fusión; por tanto, se debe reservar sangre
coagulación y contrae los vasos sanguíneos, de inmediato, a fin de que esté disponible
por mecanismos locales como la liberación de en el menor tiempo posible.
tromboxano A2. Paralelamente, las plaquetas
forman un coágulo inmaduro en el sitio de la La tabla No.1 (adaptada del Colegio America-
hemorragia. Los vasos dañados dejan expues- no de Cirujanos, Advanced Trauma Life
to el colágeno que causa el depósito de fibrina Support o ATLS) ayuda a establecer en la
y la estabilización del coágulo. Se necesitan práctica una forma de implementar las medi-
aproximadamente 24 horas para la formación das generales de manejo de los pacientes en
completa del coágulo maduro. shock hipovolémico.

203
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA No. 1. PÉRDIDA SANGUÍNEA Y GRADO DE HEMORRAGIA

Grado I Grado II Grado III Grado IV


Pérdida sanguínea (ml) Hasta 750 750 – 1,500 1,500 – 2,000 > 2,000
Pérdida sanguínea
(% volumen sanguíneo) Hasta 15% 15% - 30% 30% - 40% > 40%
Frecuencia de pulso < 100 > 100 > 120 > 140
Presión arterial Normal Normal Disminuida Disminuida
Presión de pulso
(mmHg) Normal o aumentada Disminuida Disminuida Disminuida
Frecuencia respitaroria 14 – 20 20 – 30 30 – 40 > 35
Diuresis (ml/h) > 30 20 – 30 5 – 15 Insignificante
SNC / Estado mental Ansiedad leve Ansiedad moderada Ansiedad, confusión Confusión, letargo
Restitución de líquidos
(regla de 3:1) Cristaloides Cristaloides Cristaloides y sangre Cristaloides y sangre

Luego de haber diagnosticado y clasificado la para la reposición de sangre con cristaloides,


pérdida sanguínea, es importante tratar de es- ello significa que en una fractura de femur se
tablecer la etiología del shock. En la mayoría debe considerar una infusion de líquidos de
de los casos la causa es hipovolemia. Sin em- al menos 4500 mL como objetivo final de la
bargo existen otras causas, como el shock car- reanimación.
diogénico, que ocurre en pacientes con patolo-
gía cardiovascular previa o trauma cardíaco. La pérdida de líquidos no solamente está dada
También se debe tener en cuenta el shock por la pérdida de sangre sino también por el
neurogénico, secundario a la pérdida del con- líquido que se deposita por edema en los teji-
trol vasomotor, pero no como consecuencia dos. Estas pérdidas se deben estimar y con-
de trauma cráneo-encefálico aislado. El shock templar para cuantificar la infusión de fluidos.
séptico es infrecuente en los pacientes trau-
matizados que acuden tempranamente a los El tratamiento del shock tiene dos objetivos
servicios de urgencias. Otras causas muy im- fundamentales:
portantes de shock en esos pacientes son el
neumotórax a tensión y el taponamiento 1. Control de la hemorragia sanguínea.
cardíaco. 2. Restablecimiento del volumen intravascular.

Algunas lesiones sirven como parámetro para El control de la hemorragia se puede lograr,
cuantificar la pérdida del volumen sanguíneo según la gravedad de la lesión, con simples
y para calcular la reposición líquidos. En va- medidas de presión o eventualmente, con he-
rios manuales (como el del ATLS) se mencio- mostasia quirúrgica. El restablecimiento del
na que, por ejemplo, una fractura de tibia pue- volumen intravascular se logra mediante la infu-
de dar lugar a un hematoma de más o menos sión de líquidos y componente sanguíneos.
750 mL, una fractura del fémur a uno 1500
mL y una fractura de pelvis a uno de 2000 mL Es muy importante seguir los parámetros del
o mayor. Si se utiliza la fórmula de tres a uno ATLS con énfasis en las prioridades de reani-

204
CAPÍTULO XVII: SHOCK HEMORRÁGICO

mación, como son el control de la vía aérea y Como regla general, la recomendación del ATLS
la oxigenación. Durante todo este proceso se es la de iniciar la reanimación de un paciente
tiene que reducir, en lo posible, la pérdida de traumatizado joven, sin antecedentes médicos
calor. Se colocan las sondas adecuadas, se importantes, con una infusión de dos litros de
toman las radiografías pertinentes y simultá- lactato de Ringer (en el paciente pediátrico 20
neamente se canalizan dos venas periféricas mL por kilo de peso) a temperatura de 37 gra-
con catéteres cortos y del calibre apropiado. dos centígrados. Los vasoconstrictores están
Se recomienda el uso de catétetes calibre 14 contraindicados en la reanimación inicial.
o 16 G, en venas periféricas como las antecu-
bitales, la safena en el maléolo, la yugular ex- COLOIDES Y CRISTALOIDES
terna, la braquial, la cefálica, la basílica, la
femoral, dejando los accesos centrales como Cuál es el fluido ideal para la renimación? La
última opción en situaciones extremas. recomendación del ATLS es la de iniciar con
lactato de Ringer. Las razones expuestas son
Se utilizan estas punciones para tomar mues- la acidosis metabólica hiperclorémica que
tras de sangre que se envían al laboratorio puede producir el uso de solución salina y los
para cuadro hemático, hemoglobina, química costos elevados de los coloides, que no han
sanguínea, electrolitos, pruebas de coagula- demostrado ventajas en la reanimación.
ción, medición de ácido láctico. Es necesario
no olvidar nunca las pruebas toxicológicas (de Se encuentran en estudio las soluciones hiper-
importancia médico-legal) lo mismo que la tónicas y aún no se generaliza su uso. En la
prueba de embarazo en todas las mujeres en tabla No. 2 se exponen algunos de los puntos
edad reproductiva. de controversia entre los coloides y cristaloides.

TABLA No. 2. COLOIDES VS CRISTALOIDES

Coloides Cristaloides
Costo Relativamente caros Relativamente baratos
Duración Duración de acción varias horas o mas Edema periférico mínimo cuando los capilares
corta vida horas estan intactos
Flujo renal Flujo renal disminución de GFR (diuresis Volumen de infusión relativamente mayor
osmótica con dextran) L mayor flujo
Edema pulmonar Edema pulmonar renal T puede ocurrir con > permeabilidad capilar
estudios no concluyentes
Coagulación Efectos sobre la coagulacion anormalidades Trombocitopenia dilucional
plaquetarias

GFR: Tasa de filtración glomerular

205
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CUANTIFICACIÓN DEL SHOCK • D O2 = (FC ◊ VL) ◊ [(1.34 ◊ [Hb] ◊ Sa O2 )


+ (Pa O2 ◊ 0.0031)] ◊ 10.
La evaluación de la perfusión tisular y de la
oxigenación no se ha logrado hacer de manera El aporte de oxígeno (DO2) depende enton-
precisa y práctica, pero algunas mediciones ces del volumen latido (VL) y de la frecuencia
permiten aproximarse a una cuantificación de cardíaca (FC=, de la hemoglobina (Hb) y la
estos procesos. Lo primero que se evalúa son concentración parcial de oxígeno (PaO2).
los signos vitales y en general todos los cam-
bios que se observan en respuesta a las me- Se puede mejorar la volemia con el aporte de
didas instauradas. fluidos intravenosos. Es necesario mantener
un valor adecuado de hemoglobina mediante
También se utiliza la medición de la presión trasfusiones y asegurar una apropiada frac-
venosa central, el monitoreo del estado ácido ción inspirada de oxígeno de acuerdo a las
base, las mediciones con el catéter de arteria características de cada paciente y al meca-
pulmonar y otros métodos como la tonometría nismo de origen del trauma.
gástrica, la oximetría tisular y la capnografía
sublingual para tratar de obtener una cuantifi- A continuación se describen algunos objetivos
cación objetiva del estado de perfusión tisular. de la reanimacion descritos en la literatura y
que pueden usarse como puntos de referen-
Todas estas mediciones invasivas son impor- cia.
tantes para la monitorización si las condicio-
nes del paciente lo permiten, más factibles qui- Se ha descrito tambien el papel del intestino
zás en la unidad de cuidados intensivos. Para en situaciones de shock y se puede resumir
colocar una línea central o un catéter de arteria en los siguientes puntos:
pulmonar se requieren condiciones de perso-
nal y de equipos que garanticen la seguridad • La lesión intestinal genera citoquinas y
del paciente. mediadores proinflamatorios.
• La linfa derivada del intestino lesiona el
Tanto la acidosis como la alcalosis son indices pulmón.
importantes de mortalidad La acidosis interfie- • Los ganglios mesentéricos son los cana-
re con la respuesta a las catecolaminas, pro- les críticos.
duce arritmias cardíacas e inhibe la glicolisis • Minimizar la lesión: disminuir la duración y
anaerobia. No se recomienda infundir bicarbo- severidad de la isquemia.
nato en la reanimación inicial de los pacientes
en shock hipovolémico. Luego de la adiministración inicial de líquidos
se describen clásicamente tres clases de res-
puesta que varían de acuerdo a la severidad
TRATAMIENTO de las lesiones.

El objeto de la reanimación es el restableci- 1. Respuesta rápida que se mantiene cuando


mento de la adecuada perfusión tisular. se continúa la infusión de líquidos a niveles
basales. Significa que la pérdida de volú-
La fórmula del aporte de oxígeno permite evi- men no es tan significativa. Se puede con-
denciar los factores que se pueden modificar siderar al paciente como estable para con-
y mejorar: tinuar el estudio de sus lesiones.

206
CAPÍTULO XVII: SHOCK HEMORRÁGICO

2. Respuesta transitoria: implica una pérdida Otro punto para recordar es el seguimiento
importante de sangre, que seguramente clínico y de laboratorio de los pacientes poli-
requiere de amplia reposición de volumen transfundidos, debido a que el anticoagulante
y probablemente de componentes sanguí- usado en las bolsas de sangre es citrato de
neos al igual que de un procedimiento qui- sodio, que tiene la propiedad de quelar el cal-
rúrgico para controlar la hemorragia. cio y producir hipocalcemia; por lo tanto se
3. Ausencia de respuesta, que significa he- debe estar alerta para su reposición en los
morragia masiva y/o persistente que impli- casos que lo ameriten.
ca un manejo agresivo por parte del equi-
po de trauma. Se debe tener especial atención en el diagnós-
tico y seguimiento de pacientes ancianos, em-
Las opciones respecto al aporte de compo- barazadas, atletas de alto rendimiento, pacien-
nentes sanguíneos son básicamente: tes que esten tomando antagonistas del calcio,
betabloqueadores, antihipertensivos y aque-
• Glóbulos rojos. llos con marcapasos o desfibriladores implan-
• Sangre cruzada tados, debido a que no ofrecen manifestacio-
• Tipo específico nes clínicas ni respuestas usuales en esta-
• “O” negativo. dos de hipovolemia.
• Autotransfusión.
En resumen: un error común en el manejo del
Se puede utilizar la sangre del paciente en shock hipovolémico es no reconocer su pre-
ciertas circunstancias como el trauma de tórax, sencia tempranamente. Si hay demora en el
como se describe en la guía correspondiente diagnóstico habrá demora en la reanimación.
a Autotransfusión. Una de las causas de retardo es concentrar-
se en la tensión arterial o en el hematocrito y
Si este recurso no es viable se deben utilizar no en los signos importantes de hipoperfusión
los productos del banco de sangre de acuerdo tisular.
con la gravedad del paciente. En este caso
se pueden solicitar varias unidades Respecto Otro error es el de dar prioridad a las lesiones
a las complicaciones que se observan frecuen- más obvias dejando pasar lesiones vitales por
temente en estos pacientes, como la coagulo- falta de organización y reevaluación. En pacien-
patía, podemos mencionar que sus principa- tes con reanimaciones masivas se debe evitar
les causas son: la hipotermia, que lleva a coagulopatía y a arrit-
mias, con métodos sencillos como el calenta-
• Dilución. miento de los líquidos y abrigo del paciente.
• Hipotermia.
• Disminuye tasa de reacciones químicas.
>PT PTT.
• Laboratorio realiza pruebas a 37oC. LECTURAS RECOMENDADAS
• TCE severo.
1. American College of Surgeons. ATLS, Programa
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi-
El diagnóstico de la coagulopatía debe ser clí- cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole-
nico con ayuda del monitoreo de las pruebas gio Americano de Cirujanos, Chicago, 1997.
de laboratorio. Eventualmente el manejo debe 2. Balogh Z, McKinley BA, Cocanour CS, et al.
hacerse en conjunto con hematología. Secondary abdominal compartment syndrome is

207
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

an elusive early complication of traumatic shock 12. Martinez-Mier G, Toledo-Pereyra LH, Ward PA
resuscitation. Am J Surg 2002; 184:538-43. Adhesion molecules and hemorrhagic shock. J
3. Dabroski GP, Steinberg SM, Ferrara JJ. A critical Trauma 2001; 51:408-415.
assessment of endpoints of shock resuscitation. 13. McKinley BA, Kozar RA, Cocanour CS, et al.
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4. Dutton RP, Mackenzie CF, Scalea TM. Hypoten- respond better. Arch Surg 2002; 137:578-8.
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on in-hospital mortality. J Trauma 2002; 52:1141-6. mal versus supranormal oxygen delivery goals in
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53:446-50. tion of traumatic shock monitored using near
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208
CAPÍTULO XVIII: MANEJO DE LAS QUEMADURAS ELÉCTRICAS

CAPÍTULO XVIII

Manejo de las quemaduras eléctricas

José Félix Patiño R. MD, FACS (Hon)


Oficina de Recursos Educacionales - FEPAFEM
Departamento de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá.

GENERALIDADES

L a variada y compleja patología que produ-


ce la electricidad es diferente de la patolo-
gía derivada de las quemaduras por llamas o
sana de la piel y los tejidos superficiales, los
cuales pueden verse mínimamente afectados.

por calor intenso. Además, la electricidad de por sí puede le-


sionar órganos vitales como el corazón o el
La gravedad de las lesiones depende de tres cerebro, con o sin quemadura.
factores principales:
Se reconocen tres clases principales de le-
a. amperaje y voltaje de la fuente eléctrica; sión por electricidad:
b. resistencia de los tejidos;
c. duración de la exposición. a. Lesión directa por la corriente eléctrica.
b. Quemadura electrotérmica por arco eléctrico.
Las quemaduras eléctricas son quemaduras no c. Quemadura por llamas de la ignición de
térmicas causadas por un agente exógeno, la ropajes.
electricidad, capaz de producir daño de la der-
mis y, especialmente, de los tejidos profundos. Como en otro tipo de quemaduras, cuando hay
ignición de ropas se produce humo y gases
La fuente de energía eléctrica carece de ener- tóxicos que pueden causar lesiones graves
gía térmica importante antes de su interacción del tracto respiratorio por inhalación. La resis-
con los tejidos, pero se transforma en energía tencia de los tejidos es variable, de acuerdo
térmica al interactuar con la materia biológi- al esquema siguiente:
ca. Las quemaduras se deben a la generación
de calor por la resistencia que ofrecen los di- 1. Hueso.
versos tejidos y órganos del cuerpo. 2. Grasa.
3. Tendon.
Las quemaduras eléctricas, aunque compar- 4. Piel (variable según humedad y espesor,
ten características con las térmicas, exhiben callosidad, vascularidad limpieza).
notorias diferencias. Típicamente causan efec- 5. Músculo.
tos tardíos y lesiones profundas graves que 6. Vasos sanguíneos.
no corresponden a la apariencia relativamente 7. Nervio.

205
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En orden decreciente de resistencia, los teji- La quemadura por arco eléctrico resulta del
dos se ordenan así: salto de la electricidad entre dos superficies
cargadas, especialmente en áreas de flexión
piel > hueso > grasa > nervio > múscu- tales como la muñeca, el codo, axila o fosa
lo > sangre > líquidos corporales. poplítea.

El hueso es el tejido que presenta mayor resis- La incandescencia de las vestimentas aña-
tencia y, por lo tanto, genera las máximas tem- de lesiones secundarias térmicas por llamas
peraturas. Por ello el fenómeno de las des- y lesiones del tracto respiratorio por inhala-
trucciones musculares y tisulares profun- ción de humo y gases.
das, con tejidos superficiales poco afectados,
el cuadro que es tan característico de las que- El contacto con cables de alta tensión resulta
maduras eléctricas. en caídas con fracturas y trauma múltiple
asociado (craneoencefálico, torácico, abdo-
La humedad, por sudoración o por agua, redu- minal, pélvico).
ce la resistencia de la piel, lo cual explica las
muertes por electrocución que suceden en la Una vez que la corriente penetra al cuerpo,
tina o en la ducha. su curso dentro del mismo es variable y tal
curso determina la posibilidad de sobrevida
El efecto directo de la corriente generalmente inmediata.
aparece en forma progresiva con el paso de
los días y en gran parte se debe a la lesión Las lesiones cardíacas (arritmias, fibrilación
del endotelio de arterias, venas y linfáticos. ventricular, paro) ocurren con mayor frecuen-
cia cuando el punto de entrada es una mano
Existen otros mecanismos de importancia, ta- y el punto de salida es la otra mano; las lesio-
les como el realineamiento de las fibras de nes de órganos y vísceras internas, cuan-
colágeno que puede resultar en la formación do los puntos de entrada y salida están ubi-
tardía de cataratas, o el de interferencia con cados en el tronco; las lesiones del sistema
la actividad eléctrica de órganos que poseen nervioso central cuando el punto de entrada
sistemas especializados de conducción está en la cabeza.
neurológica tales como el corazón y el siste-
ma nervioso. El daño renal, que es una necrosis tubular
aguda, puede ocurrir como resultado de lesión
La lesión muscular es similar a una por aplas- directa o, más frecuentemente, de la mioglo-
tamiento, con la aparición de mioglubinuria, binuria masiva proveniente de grandes des-
hiperkalemia y falla renal aguda. trucciones musculares y de glóbulos rojos.

El edema y la isquemia progresiva de las El choque eléctrico puede producir muerte in-
extremidades son secundarias a las trombosis mediata por fibrilación ventricular o por pa-
vasculares, al impedimento al drenaje linfático rálisis respiratoria. La fibrilación ventricular
y a la consiguiente acumulación masiva de lí- es la causa de muerte más frecuente en le-
quido en los compartimientos limitados por las siones de bajo voltaje, mientras que en las de
fascias musculares; este mecanismo da lugar alto voltaje generalmente es la parálisis del
a graves síndromes de compartimiento ce- centro respiratorio.
rrado.

206
CAPÍTULO XVIII: MANEJO DE LAS QUEMADURAS ELÉCTRICAS

La muerte por parálisis respiratoria es la cau- PROTOCOLO DE MANEJO


sa más frecuente de muerte en personas que
sufren el choque eléctrico de un rayo. a. La separación de la fuente eléctrica es
la maniobra obvia inicial, mediante la inte-
A diferencia de lo que ocurre en las quema- rrupción de la corriente eléctrica y la sepa-
duras térmicas, la extensión de la quemadura ración del paciente por medio de elemen-
de la piel no es el factor determinante de los tos no conductivos, tales como madera,
volúmenes de reemplazo de líquidos. Los fac- materiales plásticos o sintéticos, ropas se-
tores son los cambios en el hematocrito y en cas, un cinturón de cuero, etc.
los parámetros de volumen plasmático, así b. La resucitación cardiorespiratoria inme-
como la respuesta fisiológica a los líquidos diata por medio de respiración boca a boca
parenterales administrados. En realidad el tra- y masaje cardíaco cerrado puede salvar la
tamiento de las lesiones eléctricas depende vida de una persona que haya sido alcan-
del grado de la destrucción muscular y de te- zada por un rayo o que haya sufrido un
jido nervioso más que de ningún otro factor. choque eléctrico de bajo o alto voltaje.
c. Las medidas generales de reanimación y
La fasciotomía o la escarotomía tempranas soporte incluyen la administración de líqui-
pueden constituir elementos de protección dos parenterales para restaurar volumen cir-
definitiva en casos de síndrome de comparti- culatorio, estabilidad hemodinámica y diure-
miento cerrado, y lograr el salvamento de teji- sis adecuada. Se prefiere el lactato de Ringer.
dos al impedir la necrosis isquémica. Por ello d. El examen clínico cuidadoso y sistemáti-
en presencia de destrucciones masivas la co permite definir el estado de la vía aé-
demora en la desbridación adecuada resulta rea, de la capacidad respiratoria, el funcio-
desastrosa. namiento cardíaco, el estado neurológico,
la gravedad y extensión de las quemadu-
Las complicaciones principales de las que- ras superficiales (puntos de entrada y de
maduras eléctricas son: salida), la estimación de las lesiones pro-
fundas y la presencia de fracturas y de otras
a. Paro cardíaco. lesiones asociadas.
b. Parálisis respiratoria. e. La historia, con datos que suministre el
c. Insuficiencia renal. paciente o los testigos del accidente, per-
d. Lesiones neurológicas (sistema nervioso mite hacer estimativos de gravedad y de
central y nervios periféricos). pronóstico. Los datos pertinentes al tipo de
e. Infección y septicemia. la corriente, al tiempo de exposición, a las
f. Esfaceles secundarios. caídas de alturas, deben quedar consigna-
g. Hemorragia secundaria. dos en la historia clínica.
h. Cataratas. f. ECG inicial y trazados secuenciales para
determinar lesión cardiaca, especialmente
La presencia de mioglobina en la orina es cuando la corriente ha pasado a través del
indicativa de severo daño de la musculara pro- tórax; vigilar de cerca las enzimas cardía-
funda. Para evitar la necrosis tubular aguda cas, aunque es necesario tener en cuenta
por precipitación de estos hemocromógenos que la CPK-MB puede estar elevada inme-
en los túbulos renales se debe mantener una diatamente después de un choque eléctri-
diuresis profusa, de 100-150 ml/hora en el co sin que necesariamente exista lesión del
adulto y de 1.5-2 ml/hora en el niño. miocardio.

207
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

g. Radiografías de tórax, de columna cervi- El nivel de la presión se determina con un


cal, lumbosacra y de huesos, cuando el pa- simple manómetro de solución salina.
ciente ha sufrido caída de postes, etc., para o. Estudios con radionúclidos (xenón 133,
establecer la presencia de fracturas aso- pirofosfatos o con tecnecio-99) para esta-
ciadas. blecer la presencia de áreas de necrosis
h. La TAC está indicada cuando se sospecha tisular; pueden ser de ayuda en la defini-
lesión cerebral. Las imágenes por TAC y ción de la magnitud de la desbridación qui-
resonancia magnética son útiles en la va- rúrgica o de una amputación.
loración del daño tisular profundo. p. La arteriografía puede ser de utilidad en
i. Pruebas de laboratorio, incluyendo cua- cuanto a determinar el grado de isquemia
dro hemático, electrolitos, nitrógeno uréico cuando se contempla una amputación ma-
sanguíneo (BUN), creatinina, glicemia, pro- yor, así como a decidir sobre el nivel de la
teinemia (y albuminemia), enzimas hepáti- amputación.
cas y cardíacas, pruebas para transfusión, q. Similar utilidad puede tener el uso de la
orina para cuantificación de cromogeneos, fluorescaína por vía I.V. en dosis de 15-
albuminaria y sedimento, gases sanguí- 20 mg/kg, inyectada lentamente en un
neos. período no menor de 5 minutos, en el curso
j. La profilaxis antitetánica está indicada en de una intervención quirúrgica mayor. La
quemaduras severas. distribución e intensidad de la tinción tisular
k. Si hay hemoglobinuria, monitorizar el pH son parámetros de viabilidad.
sanguíneo y administrar bicarbonato de so- r. La desbridación de los tejidos desvitaliza-
dio para alcalinizar la orina y mantener el dos constituye la clave del manejo quirúr-
pH del plasma en niveles >7.35, al tiempo gico. El manejo de la herida por quemadu-
que se administran líquidos abundantes pa- ra eléctrica no es diferente del manejo de
ra sostener una diuresis de 100-150 ml/ la quemadura por llama, pero teniendo en
hora en el adulto. cuenta que la desbridación inicial debe ser
l. El tratamiento inicial de las lesiones seguida, a las 24-48 horas, por una segun-
debe ser conservador bajo meticulosa ob- da desbridación, por cuanto la magnitud de
servación, por cuanto la magnitud del daño la necrosis puede ser superior a la que ini-
sólo se hace aparente a los 5-10 días. cialmente se estimó.
m. Los antibióticos tópicos son de menor utili-
dad en las quemaduras eléctricas. La peni-
LECTURAS RECOMENDADAS
cilina profiláctica por vía sistémica para
prevenir la infección estreptocóccica y clos- 1. Jain S, Bandi V.Electrical and lightning injuries. Crit
tridiana de los tejidos necróticos profundos Care Clin 1999;15:319-31.
está indicada en choques de alto voltaje. 2. Koumbourlis AC. Electrical injuries. Crit Care Med
2002; 30(11 Suppl):S424-30.
n. La necesidad de hacer fasciotomía se 3. Lee RC. Injury by electrical forces: pathophy-
establece según los niveles de la presión siology, manifestations, and therapy. Curr Probl
tisular en los compartimientos afectados. Surg. 1997; 34:677-764.

208
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

CAPÍTULO XIX

Trauma de tórax

Fidel Camacho, MD, FACS


Profesor Asociado de Cirugía
Director del Programa de Postgrado de Cirugía del Tórax,
Facultad de Medicina, Universidad El Bosque.
Jefe de la Sección de Cirugía de Tórax,
Fundación Santa Fe de Bogotá

Román Zamarriego, MD
Cirujano de Tórax Hospital Santa Clara,
Universidad El Bosque

Mauricio González, MD
Fellow del Programa de Postgrado de Cirugía de Tórax,
Universidad El Bosque

ASPECTOS GENERALES

E l trauma se define como una fuerza ex-


terna, estrés o acto de violencia física
contra un ser humano. Constituye un gran pro-
En Colombia la mortalidad es máxima en las
heridas por armas de fuego, seguida por el
trauma cerrado; en el último renglón se en-
blema de salud pública, y es la primera causa cuentran las heridas por armas blancas. La
de mortalidad en las personas de edad pro- tasa de mortalidad es de 3-10% en las heri-
ductiva en nuestro país. En Colombia ocurren das del tórax por arma blanca y de 14-20%
aproximadamente 40.000 muertes violentas en las producidas por arma de fuego.
cada año. En los Estados Unidos el trauma
es la cuarta causa de muerte luego de la en- La incidencia de lesiones del tórax por trauma
fermedad coronaria, el cáncer y las enferme- cerrado es de 4%, mientras la de las lesiones
dades cerebro-vasculares. penetrantes es del orden de 96%.

Se estima que 25% de las muertes por trau- En el trauma se presentan tres picos de mor-
ma son consecuencia de lesiones torácicas y talidad: uno, inicial, se da en los primeros mi-
que éstas contribuyen la mitad de la mortali- nutos luego del trauma, el cual aporta un 50%
dad general por trauma. Además, se calcula de la mortalidad global; un segundo pico ocu-
que por cada persona que muere por trauma rre en las 3 horas siguientes al trauma, y con-
hay tres lesionados, lo cual se traduce en un tribuye en un 20%; y un tercer pico correspon-
gran costo económico, moral y social. de a la mortalidad tardía, que aporta un 30%.

209
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Se ha considerado la primera hora luego del locidad. Por ello los proyectiles de alta veloci-
trauma como el “periodo de oro”, durante el dad (>1500 m/seg) son los que producen má-
cual, con un manejo adecuado, rápido y opor- ximo daño en los tejidos por inducir una ma-
tuno, se puede reducir la mortalidad en el se- yor cavidad temporal; es 36 veces mayor la
gundo y tercer pico de la distribución trimodal lesión de los proyectiles de alta velocidad que
de la mortalidad por trauma. la de los proyectiles de baja velocidad. Las
armas militares son de alta velocidad, a dife-
Lo anterior significa que con manejos adecua- rencia de las civiles, que son de baja veloci-
dos y ordenados se disminuyen tanto la mor- dad. Siendo el pulmón un órgano que no es
talidad como la morbilidad, algo que se ha vis- totalmente sólido sino conformado por un con-
to también en el devenir de la historia: al com- siderable volumen de aire, la absorción de la
parar la Guerra Civil Americana con la Segun- energía cinética puede ser menor en compa-
da Guerra Mundial, se observa una disminu- ración con otros órganos más sólidos, como
ción de la mortalidad en los pacientes trauma- el hígado, por ejemplo.
tizados de 63% a 12%; esta reducción en la
mortalidad se debe, principalmente, a mejo- El trauma cerrado o contundente resulta de
res técnicas anestésicas, a los antibióticos, al la aplicación de energía sobre los tejidos, lo
desarrollo de bancos de sangre y a mejores cual los lesiona, sin violar su integridad. La
servicios de transporte. lesión se produce por mecanismos de disper-
sión de la energía cinética, compresión y ace-
leración y desaceleración. Este tipo de trau-
MECANISMOS DE TRAUMA ma se asocia con la mayor mortalidad en los
Estados Unidos, y es causado principalmen-
El trauma de tórax, como el trauma general, te por accidentes de transito.
se clasifica de acuerdo a su mecanismo en
abierto y cerrado.
FISIOPATOLOGÍA DEL TRAUMA
El trauma abierto o penetrante corresponde a DE TÓRAX
una lesión que viola la integridad de los tejidos;
en el caso del trauma de tórax se define como El sistema cardiovascular es el responsable
la lesión que atraviesa la pleura parietal. Es el de la oxigenación, la eliminación de CO 2 y el
tipo más común en nuestro medio y es cau- aporte de sangre a los tejidos periféricos; si
sado por heridas por arma blanca y por arma se presenta una disfunción del sistema por
de fuego. En la herida por arma blanca la le- trauma, ello se traduce en acidosis, hipercap-
sión se produce únicamente en el trayecto que nia e hipoxia tisular.
compromete el tejido penetrado, a diferencia
de la lesión por proyectil de arma de fuego, en La hipoxemia resulta de dos mecanismos: la
la cual no sólo hay afección por el trayecto del hipovolemia secundaria a sangrado, y la alte-
proyectil (cavidad permanente), sino también ración de la relación V/Q secundaria a diver-
por la energía cinética que éste transfiere a los sos mecanismos como contusión pulmonar,
tejidos por donde cruza (cavidad temporal). hematomas, colapso alveolar y cambios de la
presión intratorácica (hemotórax, neumotórax).
Al observar la fórmula de la energía cinética,
EC = Ω M x V2, se ve cómo el componente La hipercapnia se produce por una mala venti-
que mayormente afecta el resultado es la ve- lación secundaria a cambios de la presión

210
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

intratorácica y a alteración de la conciencia; la mas que se presentan en cada uno de los pun-
acidosis se da por una mala perfusión de los to del ABC; se identifican 5 entidades que se
tejidos, que resulta en la acumulación intrace- relacionan con el trauma de tórax y que se
lular de ácido láctico, y por elevación de la ten- deben diagnosticar y tratar rápidamente por-
sión del CO2. El manejo de los pacientes afec- que amenazan de manera aguda la vida del
tados por estos mecanismos es multimodal. paciente: neumotórax a tensión, neumotórax
abierto, tórax inestable, hemotórax masivo y
taponamiento cardiaco. Además, se debe con-
MANEJO INICIAL siderar la posibilidad de realizar una toracoto-
mía de reanimación.
El manejo inicial de todo paciente traumatiza-
do se debe cumplir en todos los pacientes con REVISIÓN SECUNDARIA
trauma de tórax. La valoración sistemática
más adecuada es la que describe el ATLS Consiste en una valoración completa del pa-
(Advanced Trauma Life Support) del American ciente mediante examen físico completo, inclu-
College of Surgeons, método que permite rea- yendo la búsqueda de 8 lesiones que pueden
lizar una valoración rápida y precisa, con un ser potencialmente letales e importantes de
orden para atender las prioridades a fin de manejar: neumotórax simple, hemotórax, con-
controlar en forma efectiva las lesiones que tusión pulmonar, lesiones del árbol traqueo-
podrían llevar a la muerte del paciente. bronquial, trauma cardiaco cerrado, ruptura
traumática de la aorta, lesión traumática del
El orden es el siguiente: revisión primaria rá- diafragma y heridas transmediastinales.
pida, resucitación de las funciones vitales,
revisión secundaria más detallada y, por últi-
mo, inicio del manejo definitivo y la conside- MANEJO DEFINITIVO Y CONSIDERACIÓN
ración de transferencia. DE TRANSFERENCIA

REVISIÓN PRIMARIA Se inicia el manejo particular de la zona trau-


matizada y se considera la necesidad de ciru-
Es una valoración rápida de las funciones vi- gía (si no se ha presentado una indicación en
tales y se basa en el ABC del programa ATLS la valoración primaria), de estudios comple-
del Colegio Americano de Cirujanos: mentarios o de transferencia a un nivel de
A: Vía aérea con control de la columna cervical. atención más alto si no se dispone de las faci-
B: Ventilación y oxigenación (breathing). lidades necesarias para la debida atención del
C: Tratamiento del shock y control de la he- paciente.
morragia.
D: Rápida valoración neurológica.
E: Exposición total del paciente con control MANEJOS ESPECÍFICOS EN EL
de la hipotermia. TRAUMA DE TÓRAX
RESUCITACIÓN (RESTITUCIÓN DE LAS La resucitación se efectúa en forma expedita
FUNCIONES VITALES) mientras se hace a valoración primaria.

Debe ir de manera paralela con la revisión Los siguientes son aspectos específicos en
primaria, para actuar y solucionar los proble- el manejo del trauma de tórax:

211
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• El control de la vía aérea se debe realizar el cual la sangre que se encuentra en el tórax
al tiempo con la estabilización de la colum- es recogida en bolsas de transfusión median-
na cervical hasta poder descartar lesión te punción del tubo de tórax “clampeado”, para
medular; primero se verifica la permeabili- ser transfundida nuevamente al espacio intra-
dad de la vía aérea, retirando cuerpos ex- venoso.
traños y luego se procede a establecer la
vía aérea por un método temporal o uno La toracotomía inmediata que se realiza en
permanente. La obstrucción de la vía aérea el servicio de urgencias es un procedimiento
se puede manifestar por inquietud, facies de aplicación en el manejo inicial de un grupo
de ansiedad, color grisáceo o cenizo de la de pacientes con indicaciones claras. Los pa-
piel o cianosis, estridor y tirajes supraester- ciente que tienen una mayor posibilidad de
nales, epigástricos o intercostales. supervivencia son aquellos con heridas pe-
El control de la vía aérea se efectúa de ma- netrantes sobre el área precordial (especial-
nera temporal o permanente; la temporal mente por arma blanca), sin signos vitales
se hace mediante elevación de la mandí- pero con viabilidad cerebral, en quienes se
bula y el uso de una cánula orofaríngea o realiza la toracotomía de urgencia; sin embar-
nasofaríngea; la modalidad permanente se go, este procedimiento se asocia con una al-
realiza mediante intubación orotraqueal o tísima mortalidad, por lo cual algunos grupos
nasotraqueal, o por el método quirúrgico, lo cuestionan. En todo caso, es una opera-
que es la cricotiroidotomía. La traqueosto- ción formidable que sólo debe ser emprendi-
mía no es un medio adecuado para esta- da cuando existan las condiciones adecuadas
blecer vía aérea de manera urgente. Las para su realización y bajo estrictas indicacio-
indicaciones para establecer una vía aérea nes. Sus propósitos son: evacuación de la
definitiva son: apnea, hemorragia con pér- sangre presente en el pericardio que causa el
dida mayor del 30% del volumen circulato- taponamiento, control directo de la hemorra-
rio, tórax inestable, trauma craneano con gia, masaje cardiaco abierto, oclusión (“clam-
índice de Glasgow menor de 8, trauma por peo”) de la aorta descendente para mejorar
inhalación e hipoxemia o hipercapnia seve- perfusión cerebral y miocárdica y evitar el em-
ras. Si no se da la necesidad de control de bolismo aéreo; posterior a esto, el paciente
vía aérea, se coloca oxigeno por Venturi al se traslada a salas de cirugía para manejo
50%. quirúrgico definitivo.

• La normalización de la función circula-


toria requiere dos buenos accesos vascu- AYUDAS DIAGNÓSTICAS
lares periféricos, un manejo agresivo inicial
de líquidos y la identificación de otros lu- RADIOGRAFÍA DE TÓRAX
gares donde puede haber hemorragia ac-
tiva; aunque el manejo agresivo inicial con Es el método más sencillo y de mayor utilidad
líquidos parenterales puede llevar a ede- diagnóstica en la valoración del paciente con
ma del intersticio, su objetivo primordial es trauma de tórax. Debe ser solicitada en todo
el control del shock por hipovolemia, y éste paciente con trauma de tórax y en todo pa-
debe ser cumplido. ciente con politraumatismo, especialmente en
aquellos con trauma por mecanismos de alta
En el control del volumen circulatorio se debe cinética. Sirve para la valoración de los pul-
tener en cuenta la autotransfusión, método por mones y de todas las estructuras que lo

212
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

rodean; generalmente se toma la radiografía pequeños, contusión pulmonar y hernia visce-


en proyección antero-posterior en posición ral por lesión diafragmática. La TAC con me-
supina, pero si el paciente se puede movilizar, dio de contraste permite el estudio de las es-
se debe tomar la proyección vertical póstero- tructuras vasculares, y es de gran utilidad
anterior. en el diagnóstico de la ruptura traumática de
la aorta.
En las lesiones leves del tórax el examen físi-
co puede ser normal, mientras la radiografía También es de utilidad diagnóstica en la iden-
de tórax muestra anormalidades que requie- tificación de complicaciones infecciosas se-
ran algún tipo de tratamiento; la radiografía cundaria a trauma, como empiemas, abscesos
de tórax inicialmente puede presentar altera- pulmonares y quistes traumáticos. La TAC sólo
ciones leves, las cuales se hacen más mar- se debe realizar en pacientes hemodiná-
cadas con la evolución, llegando a ser de va- micamente estables.
lor pronóstico a las 24 horas.
ELECTROCARDIOGRAMA
La radiografía de tórax puede demostrar enfi-
sema subcutáneo, fracturas, ensanchamien- Se utiliza en la valoración de la contusión
to mediastinal, neumomediastino, neumotó- miocárdica, y demuestra patologías previas.
rax, hemotórax, cambios en el parénquima El ECG señala alteraciones del ritmo, de la
pulmonar, elevación del diafragma, aumento frecuencia, de la onda T y del segmento ST,
de la silueta cardiaca y la presencia de cuer- cambios que se pueden encontrar en la con-
pos extraños. Además, permite el seguimien- tusión miocárdica.
to de los procedimientos ya realizados.
ECOCARDIOGRAFÍA
En pacientes con heridas precordiales que
hagan sospechar una herida cardiaca, es pro- Es de utilidad en la evaluación de lesiones aór-
cedente iniciar la toracotomía de urgencia (en ticas, especialmente de la ruptura traumática
las salas de urgencias o en el quirófano), y no de la aorta, por medio del transductor transe-
perder tiempo precioso con radiografías u sofágico. La ecocardiografía está indicada en
otros métodos imagenológicos. lesiones del corazón, tanto penetrantes, en las
cuales se demuestra liquido en el pericardio,
TOMOGRAFÍA AXIAL COMPUTADORIZADA como cerradas (contusión miocárdica), en las
(TAC) DE TÓRAX cuales se debe estudiar tanto la anatomía
como la funcionalidad del miocardio.
Su utilidad reside en la identificación de pato-
logías enmascaradas o no sospechadas y en Está indicada en paciente estables con una
la monitoría de otras. Ciertas lesiones se ob- lesión penetrante en la zona precordial, o en
servan de manera más clara en la TAC de tó- el paciente con sospecha de contusión miocár-
rax; es de particular utilidad en la evaluación dica y anormalidades persistentes en el elec-
de pacientes con trauma cerrado. trocardiograma o con hipotensión inexplicada.

Las siguientes lesiones son bien demostradas Una valoración mucho más rápida del trauma-
en la TAC: fracturas costales y del esternón, tismo de tórax se logra mediante la realiza-
luxaciones esternoclaviculares, estado de las ción de la ecografía por parte de cirujanos en
vértebras, pequeñas colecciones, neumotórax los servicios de urgencia; se han demostrado

213
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

buenos resultados, con especificidad del 97% ción y escapes aéreos, además del tratamien-
y sensibilidad del 100% en la valoración de to de atelectasias.
trauma penetrante precordial, así como en el
diagnóstico de hemotórax.
LESIONES ESPECÍFICAS
ANGIOGRAFÍA TORÁCICA
Aproximadamente 85% de las lesiones del
La aortografía es el “patrón oro” en el diag- tórax se manejan de manera simple, y única-
nóstico de la ruptura aórtica. Sin embargo, se mente 15% requieren intervención quirúrgica.
viene remplazando por la escanografía heli- La cirugía solamente está indicada en sangra-
coidal y por el ecocardiograma transesofágico, dos masivos o persistentes, escapes de aire
que son métodos menos invasores y que apor- masivos o persistentes, lesiones traqueo-bron-
tan resultado similares. quiales, perforación esofágica, lesión cardia-
ca, lesión de diafragma, algunos tipos de frac-
VIDEOTORACOSCOPIA turas, lesión de grandes vasos y problemas
tardíos como el empiema postraumático. Al-
Se registra un aumento en la utilización de gunas de las lesiones torácicas que pueden
esta modalidad, principalmente en la evalua- poner en peligro la vida del paciente se tratan
ción del hemidiafragma izquierdo en pacien- de manera sencilla mediante el control de la
tes con heridas penetrantes toraco-abdomina- vía aérea, la colocación de un tubo de tórax o
les, hemotórax masivos o persistentes y en el de una aguja para drenar un neumotórax a
tratamiento de complicaciones como empie- tensión.
mas, escapes aéreos persistentes y hemo-
tórax coagulado. NEUMOTÓRAX A TENSIÓN

La principal contraindicación es la inestabilidad Resulta de lesión de la caja torácica o del


hemodinámica; otras contraindicaciones son: pulmón que establece un mecanismo valvular
sospecha de lesión del corazón y grandes vasos, de una sola vía, el cual a su vez produce acu-
intolerancia a la ventilación de un solo pulmón, mulación y atrapamiento del aire en el espa-
toracotomía previa, coagulopatia y la indicación cio pleural, hasta crear una gran presión po-
de toracotomia o esternotomia de urgencia. sitiva que causa colapso total del pulmón y
desplazamiento del mediastino con angulación
VENTANA PERICÁRDICA SUBXIFOIDEA de las cavas y disminución del retorno veno-
so; todo esto se manifiesta en inestabilidad
Es un procedimiento tanto diagnóstico como hemodinámica que pone en grave peligro la
terapéutico en el hemopericardio causado por vida del paciente.
herida penetrante en el área precordial. La
pericardiocentesis no se debe realizar por el Se debe sospechar en todo paciente con ines-
alto grado de falsos negativos y positivos, y la tabilidad hemodinámica; establecido el neu-
posible lesión de miocardio. motórax a tensión, el paciente presenta au-
sencia de ruidos respiratorios e hiperresonan-
BRONCOSCOPIA cia en el hemitórax afectado y distensión de
las venas del cuello con desplazamiento de
Se utiliza en pacientes con posible lesión de la tráquea.
la vía aérea, hemoptisis, trauma por inhala-

214
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

El tratamiento consiste en la descompresión de movimiento paradójico del segmento afec-


urgente y rápida del espacio pleural, lo cual tado durante la inspiración, que lleva a dificul-
se logra con la colocación de una aguja o ca- tad en la ventilación; en ocasiones se puede
téter en el segundo espacio intercostal sobre producir alteración del retorno venoso por
la línea medio axilar, a fin de convertir un neu- compromiso de las cavas por movimiento del
motórax a tensión en un neumotórax simple. mediastino. Para que haya tórax inestable se
Posteriormente se coloca un tubo de tora- deben presentar por lo menos 4 fracturas cos-
costomía a succión o drenaje cerrado. tales en 2 ó más sitios; se asocia con una alta
frecuencia de contusión pulmonar (74% cuan-
NEUMOTÓRAX ABIERTO do hay 7 fracturas costales). Lo que más lleva
al deterioro de la oxigenación es el dolor y la
Se denomina también lesión aspirante del tó- contusión pulmonar asociada.
rax. Se instaura cuando en la pared de la caja
torácica ocurre un defecto mayor de 2/3 del Muchos de estos pacientes, tal vez la mayoría,
diámetro de la tráquea, lo que lleva a igualar pueden ser manejados con terapia respiratoria,
las presiones de la pleura y del exterior, abo- oxígeno y control del dolor; la ventilación mecá-
liendo en el tórax la presión negativa necesa- nica está indicada sólo cuando hay deterioro res-
ria para una ventilación efectiva. Se produce piratorio a juzgar por la gasimetría: Pa02 <60
colapso del pulmón y movimiento de vaivén mmHg con FIO2 de 50%, PaCO2 >35 mmHg,
del mediastino, todo lo cual conduce a imposibilidad de un buen control del dolor, difi-
hipoxemia y shock. cultad en el manejo de las secreciones o au-
mento progresivo del trabajo respiratorio. La ne-
En su manejo no se debe hacer una oclusión cesidad de cirugía se deriva del control de lesio-
inicial total del orificio por el peligro de con- nes asociadas, o cuando se presentan grandes
vertirlo en un neumotórax a tensión; más bien defectos o lesiones masivas de la caja torácica.
se construye una válvula unidireccional de
escape de aire (Tabla 1). Posteriormente se HEMOTÓRAX MASIVO
coloca un tubo de toracostomía que se co-
necta a drenaje cerrado, y una vez compro- Se produce por la rápida acumulación de san-
bada su adecuada posición mediante radio- gre en el espacio pleural. Su principal causa
grafía de tórax, se procede con el manejo de es la lesión del hilio pulmonar o de los vasos
la herida; si el defecto es grande, puede ser sistémicos de la reja costal.
necesaria la reconstrucción de la caja torácica.
El paciente se puede presentar con inestabili-
dad hemodinámica y ausencia de ventilación
TABLA 1 en un hemitórax; el cuadro clínico es secun-
INSPIRACIÓN vendaje se adhiere y evita entrada de aire dario a la hipovolemia y a la alteración V/Q
ESPIRACIÓN el margen abierto no sellado permite la sali-
que lleva a shock y dificultad respiratoria se-
da de aire vera. El tratamiento consiste en el manejo del
shock, descompresión del espacio pleural con
un tubo de toracostomía, recolección del san-
TÓRAX INESTABLE grado en bolsas de transfusión para volver a
colocar la sangre en el espacio intravascular,
Se define como la incompetencia de un seg- y luego de una rápida estabilización se lleva
mento de la caja torácica con la producción a cirugía.

215
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El ATLS del American College of Surgeons denominan heridas precordiales y en todo


define el hemotórax masivo como el drenaje paciente afectado se debe descartar una le-
de 1.500 mL de sangre en el espacio pleural sión cardiaca.
en el momento de la colocación del tubo o un
drenaje mayor de 200 mL por hora en 2 a 4 Los pacientes con heridas precordiales se di-
horas. Tabla 2. viden en tres clases:
1. Paciente estable.
2. Paciente inestable (hipotensión y
TABLA 2 taquicardia).
3. Paciente en estado agónico.
HISTORIA CLÍNICA 1500 CC PASO DEL TUBO
De acuerdo con esta clasificación, se estable-
TORACOTOMÍA
EXAMEN FÍSICO DRENAJE >200 ml/hora ce el diagnóstico de posible lesión cardiaca
RX TÓRAX de la siguiente manera: en el tipo 1 por medio
de ecocardiografia, ecografía o ventana peri-
HEMOTÓRAX TUBO cárdica; en el tipo 2 por medio de la ventana
DE TÓRAX pericárdica; y en el tipo 3 se requiere toraco-
MEJORÍA RETIRO TUBO tomía de urgencia (anterolateral izquierda). Si
por algún otro método se confirma la presen-
RX
cia de líquido en el saco pericárdico, se debe
NO MEJORÍA TORACOSCOPIA (48)
hacer una toracotomía izquierda anterolateral
o una esternotomía para la reparación de la
herida en el corazón.
TAPONAMIENTO CARDIACO
NEUMOTÓRAX SIMPLE
Resulta de un trauma cardiaco penetrante, por
acumulación de sangre en el saco pericárdico, Es la lesión más común luego de trauma pe-
lo cual lleva a un efecto restrictivo en las cavi- netrante, y se produce por una pérdida de la
dades derechas con disminución del llenado continuidad del parénquima pulmonar o de la
cardiaco y del volumen de eyección, lo que caja torácica, con entrada de aire al espacio
puede conducir a la muerte. pleural; se puede presentar también en ca-
sos de trauma cerrado por ruptura de los al-
Beck describió la tríada para el diagnóstico: véolos, por incremento de la presión intrato-
hipotensión, velamiento de los ruidos cardia- rácica, por desgarro pulmonar por mecanismo
cos e ingurgitación de las venas del cuello, de aceleración y desaceleración o por ruptu-
signos que se observan apenas en menos de ra del parénquima por una costilla fracturada.
la mitad de los pacientes con taponamiento;
otros pacientes se pueden presentar asinto- El diagnóstico se hace en el examen físico,
máticos. que demuestra hipoventilación con dificultad
respiratoria en un tórax hiperresonante; se
El área precordial, la cual ha sido denomina- puede presentar en pacientes asintomáticos.
da como el “triángulo de la muerte”, va desde
las clavículas, bajando por las líneas medio- Se confirma el diagnóstico con una radiogra-
claviculares hasta el epigastrio. Todas las le- fía de tórax, en la cual se demuestra una línea
siones penetrantes en esta localización se de neumotórax dada por la pleura visceral y

216
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

ausencia de parenquima pulmonar por enci- una sobreexpansión intrapulmonar que pro-
ma de tal línea. El neumotórax se cuantifica duce ruptura de los alvéolos, o la continuación
por medio de porcentajes relativos al volumen de la onda de contusión por el efecto de iner-
respecto al volumen de la cavidad torácica. cia que se inicia con el trauma que destruye
Se maneja mediante la inserción de un tubo los alvéolos. Todo lo anterior lleva a una lesión
de toracostomía cerrada. de la membrana alveolo-capilar que produce
hemorragia intra-alveolar, edema del intersti-
Existe controversia sobre el uso de antibióticos cio, atelectasias en áreas adyacentes, aumen-
en los pacientes en quienes se coloca tubo to de la producción de moco, disminución en
de tórax. Nosotros lo recomendamos en heri- la producción de surfactante y aumento de la
das penetrantes, usando una cefalosporina de permeabilidad capilar. También la onda que
primera generación. se produce en el trauma puede llevar a lacera-
ción pulmonar y a los cambios que caracteri-
HEMOTÓRAX zan a la contusión pulmonar. Estos cambios
pueden progresar con el transcurso del tiem-
Es la acumulación de sangre en el espacio po si hay continuidad en el sangrado parenqui-
pleural, lo cual resulta de una lesión del parén- matoso o resangrado.
quima pulmonar, de la pared torácica, de los
grandes vasos, del corazón o del diafragma. Todo lo anterior conduce a un aumento de pe-
Se puede producir tanto en casos de trauma so de los pulmones con incremento de la resi-
cerrado como de trauma penetrante, y la cau- stencia arterial, del contenido del surfactante,
sa principal es la lesión del parénquima pul- disminución de la distensibilidad (compliance)
monar. y del intercambio gaseoso, que lleva a la hipo-
xemia. El paciente presenta disnea, cianosis
Se detecta en la radiografía de tórax cuando y hemoptisis. En el examen físico se pueden
se han acumulado más de 300 ml de sangre escuchar estertores o ausencia de ruidos res-
con borramiento del ángulo costofrénico o piratorios.
apariencia de líquido en el espacio pleural. El
manejo consiste en el drenaje del espacio En la radiografía se observan infiltrados alveo-
pleural, generalmente mediante un tubo de lares por la hemorragia dentro de los alvéolos
toracostomía; el sangrado del parénquima se que se va instaurando progresivamente entre
detiene con la expansión pulmonar, la baja las 6 y las 12 horas post trauma y duran aproxi-
presión intravascular y la alta concentración madamente una semana. El mejor método
de tromboplastina tisular. El hemotórax sim- para la evaluación de la contusión pulmonar
ple es aquel que no cumple los criterios de es la tomografía axial computadorizada (TAC).
hemotórax masivo.
Los pacientes con contusión pulmonar deben
CONTUSIÓN PULMONAR ser hospitalizados para observación cuidado-
sa y monitoría respiratoria y cardiovascular.
Se observa tanto en casos de trauma cerra- Si la contusión afecta a más del 30% del pa-
do, como en los de trauma penetrante, espe- rénquima, se maneja en la unidad de cuidado
cialmente en heridas con proyectiles de alta intensivo. Se inicia suplemento de oxígeno pa-
velocidad. Se han planteado varias hipótesis ra mantener la PaO2 >60 mmHg, se controla
sobre el mecanismo, tales como el aumento el dolor y se realiza terapia respiratoria vigo-
brusco de la presión intra-alveolar causado por rosa. Cuando la respiración del paciente no

217
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

es adecuada, se procede con intubación rrado; sin embargo, no se conoce su verda-


orotraqueal y ventilación mecánica. dera incidencia por la dificultad en definirla
claramente por medio de los métodos diag-
La utilización de esteroides y de antibióticos nósticos disponibles en la actualidad.
sigue causando controversia. Nosotros no los
utilizamos de entrada. El antibiótico está indi- En el trauma cerrado, puede producirse tam-
cado cuando se presentan signos de infección. bién la ruptura de alguna de las cavidades
cardiacas o la ruptura valvular. La ruptura de
La contusión pulmonar es una patología gra- una cámara cardiaca produce un cuadro típi-
ve. Dependiendo de la magnitud, tiene una co de taponamiento y muerte. En algunos ca-
mortalidad que oscila entre el 11% y el 78%. sos en que se rompe la aurícula, los signos
pueden desarrollarse lentamente.
LESIONES DEL ÁRBOL TRAQUEOBRONQUIAL
Se debe sospechar contusión miocárdica en
Ocurren principalmente en el trauma penetran- pacientes con fracturas costales centrales y
te y se caracterizan por alta mortalidad debi- del esternón. Aumenta la sospecha cuando el
do a las lesiones asociadas, principalmente electrocardiograma señala algún tipo de arrit-
de los grandes vasos. En el trauma cerrado la mia, especialmente supraventricular, comple-
lesión más común de la tráquea se ubica cer- jos aislados o alteración en el segmento ST o
ca (a unos dos cm) de la carina. en la onda T. Las enzimas cardiacas no han
demostrado ser de gran utilidad en su diag-
Cuando la lesión es a nivel del cuello, puede nóstico. La troponina es más específica; sin
presentarse como una herida soplante, con embargo, no tiene valor predictivo en cuanto
enfisema y hemoptisis. Si es intratorácica, se a la aparición de complicaciones. El ecocardio-
añade neumotórax, enfisema mediastinal, y grama se utiliza en la evaluación anatómica y
al colocar un tubo de drenaje del neumotórax funcional del corazón. Demuestra existencia
hay escape aéreo persistente. de hemopericarido, zonas aquinéticas o hipo-
quinéticas del miocardio y lesiones valvulares.
El método óptimo de diagnóstico es la bron- La gamagrafía cardiaca es muy útil, pero sus
coscopia, si el paciente se encuentra estable, imágenes sólo se hacen bien definidas des-
pero en algunos casos se hace necesaria la pués de 24 horas de ocurrido el trauma.
cirugía de urgencia.
El seguimiento de estos pacientes debe ha-
Algunas veces estas lesiones se descubren cerse bajo monitoria cardiaca en la unidad de
de manera tardía por una estenosis traqueal cuidados intensivos, para tratar debidamente
o bronquial que requieren manejo quirúrgico. las arritmias y la falla cardiaca que se puedan
presentar.
TRAUMA CARDIACO CERRADO
RUPTURA TRAUMÁTICA DE LA AORTA
Una lesión frecuente en el trauma torácico
cerrado es la contusión del miocardio. Resul- Es la causa más común de muerte súbita en
ta de la transmisión de la presión causada por los accidentes automovilísticos y en caídas de
el trauma, como onda de percusión desde la alturas. La lesión se produce por un mecanis-
pared del tórax hacia el interior. En la prácti- mo de aceleración y desaceleración que in-
ca, su incidencia es de 10% en el trauma ce- duce la ruptura en una zona de la aorta que

218
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

se encuentra fija, correspondiente al nivel del sión negativa de éste. En el trauma cerrado,
ligamento arterioso. cuando hay fracturas de las 4 ó 5 últimas cos-
tillas se debe sospechar lesión del diafragma.
La mayoría de los pacientes muere en el lu-
gar de los hechos; sin embargo, algunos lle- Esta lesión aparece descrita en otra guía de
gan vivos al servicio de urgencias. Según la esta serie: Lesiones del diafragma.
historia, si se trata de un trauma de alta ciné-
tica con gran desaceleración, se debe mante- HERIDAS TRANSMEDIASTINALES
ner un alto índice de sospecha en cuanto a la
existencia de esta gravísima lesión. Son las heridas penetrantes causadas princi-
palmente por proyectil de arma de fuego que
En la radiografía de tórax hay ocho signos de atraviesan el mediastino, donde se pueden
anormalidad que hacen sospechar la ruptura lesionar corazón, los grandes vasos, el árbol
de la aorta: traqueobronquial, el esófago y el diafragma.
• Ensanchamiento mediastinal.
• Anormalidad del contorno aórtico. El paciente que ingresa con inestabilidad he-
• Opacificación de la ventana aorto- modinámica debe ser llevado a cirugía inme-
pulmonar. diatamente. En el paciente estable es nece-
• Desviación de la tráquea. sario descartar lesión de todas y cada una de
• Desviación de la sonda nasogástrica. las estructuras mediastinales, con evaluación
• Depresión o verticalización del bronquio del pericardio, angiografía, esofagograma, en-
fuente izquierdo. doscopia, broncosciopia. La TAC es de buen
• Engrosamiento paratraqueal. rendimiento. Este tipo de heridas tiene una
• Aparición de un casquete apical. tasa de mortalidad de 20% a 40%.

La radiografía de tórax no confirma el diagnós- CONTUSIÓN O HEMATOMA DE LA CAJA


tico, pero hace sospecharlo; debe continuarse TORÁCICA
el estudio con una TAC, que es un método no
invasor de alta fidelidad. Si se encuentran Se produce por la ruptura de alguno de los
dudas, se debe realizar una aortografía, aun- vasos de la rica red que irriga la caja torácica,
que el ecocardiograma transesofágico se ha formando un gran hematoma de localización
venido utilizando con buenos resultados, casi subcutánea. Se maneja mediante el control
comparables a los de la angiografía. del dolor, pero en algunas oportunidades,
cuando es de gran tamaño, se hace necesa-
Se ha propuesto la realización de un manejo rio evacuarlo quirúrgicamente y realizar he-
no quirúrgico, o cirugía diferida o colocación mostasis.
de un stent intravascular.
FRACTURAS COSTALES
LESIÓN TRAUMÁTICA DEL DIAFRAGMA
Son las lesiones más frecuentes en el trauma
Se presenta en casos de trauma penetrante de tórax. Se pueden presentar en el trauma
toracoabdominal, pero también en el trauma cerrado o en heridas por proyectil de arma de
cerrado. Hay pérdida de la continuidad del fuego. Su diagnóstico se realiza por medio del
músculo diafragma, con herniación de las vís- examen físico. Con la palpación se localiza la
ceras abdominales al tórax en razón de la pre- zona dolorosa y en algunas circunstancias se

219
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

encuentra crepitación o signo de la tecla en la ma se soluciona colocando un tubo de drena-


costilla afectada. En la radiografía de tórax no je del tórax. En algunas oportunidades, cuan-
siempre se ven las fracturas, especialmente do la laceración es grande, es necesario lle-
si no están desplazadas. La radiografía de reja var el paciente a cirugía. La tractomía o pulmo-
costal tiene poca aplicación. La gamagrafía notomía se ha utilizado para controlar la he-
ósea es muy útil después de las primeras 24 morragia y los escapes de aire. Algunos ca-
horas. Cuando se lesionan las dos primeras sos requieren resección pulmonar anatómica.
costillas se debe sospechar lesión de gran-
des vasos, y cuando se fracturan las últimas QUILOTÓRAX MASIVO
se debe descartar lesión diafragmática o intra-
abdominal. En su manejo, el control del dolor Se produce por lesión del conducto torácico
es lo más importante. que puede ocurrir tanto en el trauma cerrado
como en el trauma penetrante. Se manifiesta
FRACTURAS ESTERNALES entre el 2º y el 10º días luego del accidente, y
se sospecha por la salida de material lechoso
Se observan con mayor frecuencia en el trau- por el tubo de toracostomía; se confirma el
ma cerrado cuando se presenta impacto por diagnóstico con la medición de triglicéridos,
el timón del automovil. Se debe descartar con- cuya concentración aparece por encima de
tusión del miocardio. La mayoría se localizan 110 mg/dL. El manejo inicial se hace con su-
en el tercio superior, y el principal hallazgo es presión de la vía oral e instalación de nutri-
dolor a la palpación. Se pueden diagnosticar ción parenteral total. Con esta medida se con-
mediante radiografia lateral del esternón o sigue disminución progresiva del drenaje, has-
gamagrafía ósea. Se deben llevar a cirugía ta que cesa. Cuando el drenaje continúa en
tempranamente para fijación con alambres. niveles altos, el paciente debe ser llevado a
cirugía para ligadura del conducto torácico.
FRACTURA DE CLAVÍCULA Y ESCÁPULA
TRAUMA DE ESÓFAGO
Son muy poco frecuentes; su diagnostico se
sospecha por deformidad de la clavícula y se El trauma cerrado y el penetrante son causas
observa con facilidad en la radiografía del tó- raras de lesión esofágica, en virtud de que este
rax. El manejo es sencillo, con inmovilización órgano se encuentra protegido atrás por las
y control del dolor. Se debe descartar lesión vértebras y a que cuando la lesión por trauma
de los vasos subclavios. penetrante se produce por vía anterior, afecta
órganos vitales como los grandes vasos y,
Las fracturas escapulares son muy raras y habitualmente, estos pacientes no llegan vi-
están asociadas con trauma de alta cinética. vos a los servicios de urgencias.
Su manejo es similar al de la fractura de la
clavícula. Esta lesión aparece descrita en otra guía de
esta serie, Trauma de esófago.
LACERACIÓN DEL PARÉNQUIMA PULMONAR
TRAUMA POR INHALACIÓN
Se observa con mayor frecuencia en trauma
penetrante; la lesión puede producir sangra- También se denomina quemadura pulmonar
do del pulmón y escape aéreo en el espacio y lesión por inhalación. Se produce en explo-
pleural. En la mayoría de los casos el proble- siones o incendios, especialmente en recin-

220
CAPÍTULO XIX: TRAUMA DE TÓRAX

tos cerrados. Comienza con una lesión térmi- 5. García Herreros L. Trauma de tórax. En: Guías de
ca de la tráquea y bronquios, producida por Manejo Pre y Postoperatorio. CEJA, Bogota, 2001.
irritantes tóxicos de los productos en combus- 6. Gaspari M, Karmy-Jones R, Kralovch K, et al.
Pulmonary tractotomy versus lung resection: Via-
tión incompleta, lo cual lleva a daño de la vía
ble options in penetrating lung injury. J Trauma
aérea, daño bronquiolar del movimiento ciliar 2001; 51:1092-1097.
y de los alvéolos. Se observa aumento de la 7. Lowdermilk G, Naunhein K. Thoracoscopic
permeabilidad capilar (edema pulmonar), evaluation and treatment of thoracic trauma. Surg
broncoespasmo, disfunción respiratoria e in- Clin North Am 2000; 80:1535-1541.
fección bacteriana sobreagregada. Las que- 8. Mansour KA. Trauma of the chest. Chest Surg Clin
maduras faciales, las quemaduras de vibrisas, North Am 1997; 7:199-443.
9. Pezella A, Silva W, Lancey R. Cardiothoracic trau-
el esputo con pintas de carbón deben hacer
ma. Curr Probl Surg 1998; 35:649-789.
sospechar esta lesión, y el diagnóstico se con- 10. Rhee P, Acosta J, Bridgeman A, et al. Survival after
firma con broncoscopia. emergency deparment thoracotomy: Review of
published data from de past 25 years. J Am Coll
La evolución clínica es hacia una falla respi- Surg 2000; 190:280-298.
ratoria con edema pulmonar. El manejo debe 11. Rujeles S, Henao F. Principios de manejo del pa-
ser agresivo, con soporte ventilatorio, antibió- ciente politraumatizado. En: Manual de Cirugía. Edi-
ticos y broncodilatadores. tado por S Rujeles, F Henao. CEJA. Bogotá, 1999.
12. Sisley AC, Rozycki S, Ballard R. Rapid detection
of traumatic efussion using surgeon-performed
ultrasonography. J Trauma 1998; 44:291-297.
LECTURAS RECOMENDADAS 13. Stewart M. Resuscitation in thoracic trauma. Br J
Surg 1995; 82:280-284.
1. Cortes F, Buitrago F. Trauma de torax. Rev Fac 14. Tapias L, Rey M. Trauma de torax. Med UIS
Med 2001; 48:35-44. 1997;11:224-227.
2. Chagnon F, Mulder D. Laryngotracheal trauma. 15. Tatou E, Steinmentz E, Jazayeri S, et al. Surgical
Chest Surg Clin North Am 1996; 6:733-748. outcome of traumatic rupture of the thoracic aor-
3. Collicott PE., Advanced Trauma Life Support: past, ta. Ann Thorac Surg 2000; 69:70-73.
present, future. American Trauma Sociey. J Trau- 16. Velmahos G, Baker C, Demetriades D, et al. Lung-
ma 1992; 33:749-753. sparing surgery after penetrating trauma using
4. Feghali N, Prisant M.. Blunt myocardial injury. tractotomy, partial lobectomy, and pneumorrhaphy.
Chest 1995; 108:1673-1677. Arch Surg 1999; 134:186-189.

221
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XX

Quemaduras

Ricardo Ferrada, MD, MSP, MSCC, FACS


Profesor Titular,
Departamento de Cirugía Universidad del Valle.
Jefe, Unidad de Quemados,
Hospital Universitario del Valle
Cali

L as quemaduras representan un máximo de


injuria biológica y causan severas alteracio-
nes metabólicas, son propensas a infección se-
madura tiene apariencia inicial inocente que
puede confundir al médico inexperto.

cundaria y dan lugar a severos síndromes de Cuando se producen estas complicaciones, se


desacondicionamiento. Las secuelas pueden inicia una cascada de eventos que es muy difí-
causar graves deformidades y limitaciones fun- cil y en la mayoría de los casos, imposible de
cionales. Los servicios de urgencias deben es- detener. En efecto, el síndrome sistémico de res-
tar preparados para atender quemaduras, remi- puesta inflamatoria, la disfunción múltiple de
tiendo las más graves a centros especializados. órganos y su posterior falla, así como las infec-
ciones, son todas consecuencias de una que-
El intervalo entre el periodo postresucitación madura muy severa o de una que, sin ser severa,
y antes del comienzo de la inflamación es ge- fue mal manejada inicialmente. En caso de que-
neralmente el más estable en el paciente que- madura de la vía aérea o quemadura por inha-
mado. La excepción es el paciente con lesio- lación, los acontecimientos pueden ser aun más
nes de inhalación, cuyos síntomas se hacen dramáticos y con desenlace fatal muy rápido.
pronunciados a los pocos días de la lesión.

EPIDEMIOLOGÍA
DEFINICIÓN
Se estima que durante un año calendario el
Se entiende por quemadura un conjunto de fe- 1% de la población sufre una quemadura que
nómenos locales y sistémicos que resultan de la requiere tratamiento por un profesional de sa-
acción de muy alta temperatura, electricidad o lud entrenado. En Colombia más de la mitad
algunos agentes químicos. Las quemaduras se de las quemaduras se producen en pacientes
pueden producir en cualquier lugar del organis- menores de 13 años debido a líquido caliente,
mo, pero son mucho más frecuentes en la piel. como derrame de la sopa sobre el niño que
intenta movilizar el recipiente en la cocina. A
La lesión por quemaduras implica riesgos que este grupo de accidentes prevenibles, se debe
ponen en peligro la vida en los días posterio- agregar el uso indiscriminado de la pólvora, si-
res al trauma inicial. A diferencia de las heri- tuación que sólo se ha empezado a reglamen-
das por trauma penetrante, la herida por que- tar en los últimos años en algunas ciudades.

218
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

CLASIFICACIONES En el cuadro 1 se resumen los tiempos de


epitelización y calidad de la cicatriz según la
Las quemaduras de piel se clasifican en gra- profundidad de la quemadura medida con ba-
dos de acuerdo con la profundidad, en la si- se en las dos clasificaciones más utilizadas.
guiente forma:

Grado I. Corresponden a las quemaduras pro- FISIOPATOLOGÍA


ducidas por exposición solar; se compromete
la epidermis únicamente. Se produce desca- El paciente con quemaduras severas repre-
mación en los siguientes 7 a 10 días, y no senta un modelo de trauma grave que se ca-
quedan cicatriz ni cambios de pigmentación. racteriza por gran variedad de eventos fisio-
patológicos, la mayoría muy bien estudiados.
Grado II. La lesión alcanza porciones varia-
bles de la dermis. Estas quemaduras cuando 1. Edema: En los pacientes con quemaduras
son superficiales se denominan Tipo A y cica- de más del 20% de superficie corporal, se
trizan en plazo inferior a 14 días sin dejar se- produce edema no solamente en el área
cuelas importantes. Cuando destruyen parte afectada, sino además en lugares distantes
importante de la dermis, la cicatrización se pro- del sitio de la quemadura, por secuestro
duce después de los 18 días y la cicatriz es de líquido en el espacio intersticial, el cual
de mala calidad, con aparición de queloide, es muy rápido en los primeros minutos y
hiper o hipopigmentación y retracciones. Esta continúa durante las primeras 24 horas. En
quemadura también se llama tipo AB. el período inmediato postquemadura se
producen cambios en la permeabilidad ca-
Grado III. Destruye toda la dermis y por tanto pilar, a los cuales se suma el incremento
no deja restos dérmicos o epidérmicos que en la presión hidrostática por el suministro
permitan la epitelización. La cicatrización se de líquidos endovenosos y la disminución
produce por segunda intención, es decir por de la presión oncótica del plasma.
aproximación de los bordes de la superficie 2. Trastornos hemodinámicos. Después de
cruenta, y la epitelización sólo alcanza uno o la lesión térmica tanto el índice cardíaco
dos centímetros desde el borde de piel sana. como la resistencia vascular sistémica se
Estas quemaduras se denominan tipo B. comportan de acuerdo con la hipovolemia
existente y el resultado de la resucitación
Grado IV. La lesión grado IV implica destrucción con líquidos endovenosos. En el período
de músculo o estructuras óseas. Generalmente inmediato postquemadura se produce hi-
es el resultado de la energía por electricidad. percontractilidad y no depresión del miocar-

CUADRO 1. TIEMPO DE EPITELIZACIÓN Y CALIDAD DE LA CICATRIZ SEGÚN TIPO DE QUEMADURA

Grado Tipo Tiempo epitelización Calidad de la cicatriz


Grado I 7-10 días No hay cicatriz
Grado II superficial A 12-15 días Cicatriz mínima
Grado II intermedio AB 18-21 días Cicatriz hipertrófica
Grado III B No Epiteliza Cicatriza por segunda intención
Grado IV No Epiteliza Cicatriza por segunda intención

219
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dio. Aparentemente el fenómeno inicial de portante pase inadvertida. El examen físico


los pacientes quemados parece ser hipo- en el paciente quemado es más dispendioso
perfusión tisular muy severa que se inicia y difícil que en el paciente sin lesiones dolo-
en forma precoz, desde los cinco minutos rosas en la piel. Sin embargo la historia clínica
después del trauma. Esta hipoperfusión se y el examen inicial son definitivos para detec-
debe a hipovolemia por el secuestro de lí- tar las lesiones ocultas.
quidos ya descrito, y a vasodilatación se-
cundaria a los mediadores que se originan Las reglas básicas del examen inicial incluyen:
en el lugar de la lesión térmica.
3. Intestino. Se han documentado cambios • Registrar todos los signos fisicos medibles.
en la mucosa después de un período de El médico debe colocarse guantes estéri-
hipotensión, los que facilitan el paso de les y medir temperatura, pulso, frecuencia
bacterias a través de la mucosa intestinal. cardiaca, tensión arterial, llenado capilar y
La nutrición enteral temprana se asocia con datos de la Escala de Glasgow.
menor atrofia estructural y funcional del in- • Realizar examen físico completo. Este pri-
testino, reducción de la respuesta hiperme- mer examen es el más importante, porque
tabólica, y menor incidencia en las compli- buena parte de las decisiones posteriores
caciones infecciosas. Además del aporte se derivan de los hallazgos iniciales. El pa-
de las necesidades nutricionales, la nutri- ciente quemado permanece cubierto des-
ción enteral disminuye la aparición de las
pués del procedimiento inicial en la herida
úlceras por estrés y el sangrado digestivo.
y, por lo tanto, volver a examinarlo requiere
4. Profundización. En los pacientes quema-
retirar todos los apósitos.
dos casi siempre existen diferentes grados
• Identificar trauma asociado y tratar las
de profundidad en las áreas lesionadas, los
lesiones.
cuales varían de acuerdo a la distancia
• Buscar signos de quemaduras por inhala-
existente desde el punto de máxima lesión.
Estas zonas, conocidas como las zonas de ción y consignarlos en la historia clínica (tos
Jackson, son las siguientes: y esputo carbónico, quemaduras en las coa-
Zona de necrosis. En el lugar de la que- nas, disnea, estridor laríngeo, antecedente
madura de espesor total, la lesión anato- de recinto cerrado, cambios en la voz).
mopatológica es necrosis por coagulación. • Calcular la superficie y la profundidad y
El examen microscópico en este lugar graficarla mediante la “Regla de los Nue-
muestra ausencia de restos dérmicos. ves” (Figura 1) o el esquema de porcenta-
Zona de estasis, en la cual se observa obli- je según edad descrito por Lund y Browder
teración de la microvasculatura, evoluciona (Cuadro 2).
hacia la necrosis en las siguientes horas.
Zona de hiperhemia. Son quemaduras de
espesor parcial que evolucionan hacia la CÁLCULO DEL ÍNDICE DE RIESGO
mejoría o hacia la necrosis de acuerdo con
el tipo de terapia instaurada. Los factores de mayor incidencia en el riesgo
de mortalidad son, en su orden, el porcentaje
de quemadura, la edad del paciente, la profun-
EVALUACIÓN Y TRATAMIENTO INICIAL didad de la lesión y la inhalación. En la Unidad
de Quemados del Hospital Universitario del
La evaluación inicial del paciente quemado Valle se utiliza la fórmula de pronóstico vital
tiene como objetivo evitar que una lesión im- descrita por Garcés y colaboradores:

220
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

CUADRO 2. SUPERFICIE CORPORAL SEGÚN EDAD


Área 0-1 1-4 5 -9 10 - 14 15 Adulto A AB B Total
Cabeza 19 17 13 11 9 7
Cuello 2 2 2 2 2 2
Tórax anterior 13 13 13 13 13 13
Tórax posterior 13 13 13 13 13 13
Glúteo derecho 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5
Glúteo Izquierdo 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5
Genitales 1 1 1 1 1 1
Brazo Derecho 4 4 4 4 4 4
Brazo Izquierdo 4 4 4 4 4 4
Antebrazo derecho 3 3 3 3 3 3
Antebrazo Izquierdo 3 3 3 3 3 3
Mano derecha 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5
Mano Izquierda 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5 2,5
Muslo Derecho 5,5 6,5 8 8,5 9 9,5
Muslo Izquierdo 5,5 6,5 8 8,5 9 9,5
Pierna derecha 5 5 5,5 6 6,5 7
Pierna Izquierda 5 5 5,5 6 6,5 7
Pie Derecho 3,5 3,5 3,5 3,5 3,5 3,5
Pie Izquierdo 3,5 3,5 3,5 3,5 3,5 3,5
Total

1. Para individuos menores de 20 años:


(40-edad) + (Q A x 1) + (Q AB x 2) + (Q B x 3)
2. Para individuos mayores de 20 años:
Edad + (Q A x 1) + (Q AB x 2) + (Q B x 3)
Donde Q A = Quemadura Grado II superfi-
cial o Tipo A
Q AB = Quemaduras Grado II intermedio o
Tipo AB.
Q B = Quemadura Grado III o Tipo B.

El puntaje resultante determina una probabili-


dad de mortalidad, así:
Figura 1

0 a 40 Puntos = Sin riego vital


41 a 70 Puntos = Mortalidad mínima
71 a 100 Puntos = Mortalidad inferior a 50 %
101 a 150 Puntos = Mortalidad mayor de 50 %
151 Puntos o más = Mortalidad superior al 95%

221
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CRITERIOS DE HOSPITALIZACIÓN Estas organizaciones sugieren manejar todo pa-


ciente traumatizado en dos etapas consecutivas:
Con base en los cálculos anteriores de super- Evaluación Primaria y Evaluación Secundaria.
ficie quemada y de Índice de Severidad, se
deben identificar los pacientes con quemadu- La Evaluación Primaria comprende la secuen-
ras severas o con riesgo de complicaciones. cia nemotécnica ABCDE:

Los pacientes con quemaduras leves se pue- A= Vía aérea


den tratar en forma ambulatoria, con lo cual B= Buena ventilación
se reducen mucho los costos y también el ries- C= Circulación
go de infección por gérmenes multiresistentes. D= Déficit neurológico
E= Evitar la exposición innecesaria para pre-
En términos generales se acepta que se debe venir la hipotermia.
hospitalizar si el paciente tiene:
1. Índice de Gravedad mayor de 100 puntos. La Evaluación Secundaria por su parte com-
2. Quemaduras por electricidad o por rayo, prende historia clínica y examen físico com-
de cualquier magnitud. pleto, así como el tratamiento básico inicial.
3. Quemaduras de cualquier magnitud en pa-
cientes con falla de un órgano. Por facilidad didáctica se describe en forma
4. Quemaduras por inhalación. separada y secuencial.
5. Problemas asociados, como maltrato, in-
tento de suicidio y similares. A: Via aérea. ¿Cómo está la vía aérea del
6. Quemaduras oculares. paciente? ¿Está permeable? ¿No está ame-
7. Quemaduras profundas (Grado III o B) de nazada? El cuidado de la vía aérea se realiza
cara, cuello, manos, pies, genitales y áreas inicialmente mediante maniobras básicas no
de flexión. invasoras, las cuales consisten en levantar el
8. Niños o ancianos (<5 ó >50 años) con que- mentón y protruir el maxilar inferior o mandí-
maduras profundas de más de 5%. bula, con protección de columna cervical.
9. Niños o ancianos (<5 ó >50 años) con que- Cuando esta maniobra no es suficiente, enton-
maduras superficiales de más del 10%. ces se deben aplicar medidas invasoras, las
10.Adultos con quemaduras profundas de más cuales son inicialmente no quirúrgicas; y
del 10% o superficiales de más del 20%. quirúrgicas cuando todo lo anterior falla o es
insuficiente (Cuadro 3). Si existen signos de
En los cuatro primeros se debe considerar la inhalación o sospecha de que hubiera existido,
posibilidad de hospitalizar en Cuidados Inten- el paciente no se puede quedar solo en ningún
sivos. momento durante las siguientes 72 horas de-
bido al riesgo de obstrucción aguda e inadver-
tida de la vía aérea por edema. En efecto, el
TRATAMIENTO INICIAL edema de la vía aérea alta puede causar obs-
trucción respiratoria progresiva de evolución
El tratamiento inicial debe incluir la valoración muy rápida, y cuando ocurre, la intubación es
descrita en el Advanced Trauma Life Support muy difícil. Consecuentemente, la intubación
(ATLS) por el American College of Surgeons, y debe ser precoz y durante el procedimiento
en el Advanced Burn Life Support (ABLS) se debe estar preparado para una cricotiroido-
por la American Burn Association. tomía de urgencia. Son indicaciones de intu-

222
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

bación inmediata el edema observado en la C. Circulación. Asegurada la vía aérea y la


laringoscopia directa, el estridor laríngeo y la ventilación, el manejo de la hidratación se rea-
dificultad respiratoria según parámetros con- liza como sigue:
vencionales (Cuadro 4). • Instalar dos venoclisis por punción en una
extremidad superior no afectada por que-
B. Buena ventilación. El trauma cerrado de maduras; preferir la punción a la disección
tórax es frecuente en los pacientes quemados, y tratar de no utilizar una extremidad infe-
en particular cuando se trata de quemaduras rior para acceso venoso, por el riesgo de
eléctricas por alto voltaje. En estos casos la que- tromboflebitis séptica.
madura puede causar caídas de altura o lesión En pacientes con quemaduras superficia-
directa de la pared torácica por la energía. les de más del 30% ó profundas de más
del 15%, colocar:
En los pacientes con quemaduras producidas - Catéter venoso central y control horario
en recintos cerrados existe la posibilidad de de presión venosa central (PVC).
intoxicación por monóxido de carbono (CO), - Catéter vesical y control horario de diu-
el cual tiene afinidad por la hemoglobina 240 resis.
veces superior a la del oxígeno. Además, la - Sonda nasoyeyunal para nutrición.
disociación es muy lenta: 250 minutos con una - Sonda nasogástrica para decompresión.
Fracción Inspirada de Oxígeno (FiO 2) de 21% Se re-evalúa a las 24 horas.
(aire ambiente) y 40 minutos si la FiO 2 es - Líquidos endovenosos en la siguiente
100%. Consecuentemente, si hay sospecha forma:
de intoxicación por CO o inhalación, se debe ❏ Lactato de Ringer 4 mL/kg de peso corpo-
colocar oxígeno, preferiblemente con másca- ral, por porcentaje de superficie quema-
ra y reservorio, a 12 litros por minuto. da. Por encima del 50% se calcula sobre
esa cifra (50%). Se ordena la mitad para
las primeras 8 horas y la otra mitad para
las siguientes 16 horas, contadas a par-
CUADRO 3. MANEJO DE LA VÍA AÉREA tir de la hora de la quemadura, por bom-
ba de infusión preferiblemente.
1. Maniobras no invasoras - Con la medición horaria de diuresis y PVC,
a. Levantar el mentón ajustar el goteo de los líquidos endove-
b. Protruir la mandíbula nosos (LEV) para que la diuresis sea de
2. Maniobras invasoras 40 a 80 mL/hora en adultos y 1 a 2 mL/kg
a. No quirúrgicas: cánula orofaríngea de peso en niños. Si la diuresis es esca-
Intubación endotraqueal
sa, se ordenan bolos de Solución Salina
b. Quirúrgica: Cricotiroidotomía
al 0,9% de 250 mL en adultos y 20 mL
por kilo en niños. En estos casos, revaluar
CUADRO 4. INDICACIONES DE INTUBACIÓN el paciente para detectar el motivo del re-
querimiento adicional de líquidos; las cau-
1. Edema en laringoscopia inicial sas más frecuentes son la inhalación, la
2. Estridor laríngeo infección o el cálculo inicial equivocado.
3. Signos de dificultad respiratoria - La PVC debe permanecer por debajo de
a. Polipnea con FR >35 por minuto
12 cm. La PVC representa la capacidad
b. PaO2 < 50 mmHg
c. PaCO2 >50 mmHg de respuesta del ventrículo derecho; no
d. Falta de respuesta con FiO2 >0,4 (SpO2 <90%) existe cifra límite inferior.

223
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En los lactantes se deben incluir líquidos dex- dia. Tomar cultivo de estos focos e iniciar
trosados por su tendencia a la hipoglicemia; antimicrobianos según sospecha clínica.
en general requieren más líquidos que los - Remisión de otra institución por infec-
adultos con quemaduras de extensión similar. ción. Tomar muestra para cultivo e ini-
Los pacientes con lesiones por inhalación tam- ciar antibióticos según sospecha clíni-
bién requieren volumen mayor que el prome- ca. En infección nosocomial, los gérme-
dio. Las fórmulas sirven únicamente como nes más frecuentes son Pseudomonas
guías, la reposición exacta tanto en cantidad aeruginosa, Acinetobacter baumanni y
como en el tipo de líquidos se debe fundamen- Estafilococo aureus. La terapia empíri-
tar en la evolución clínica de cada paciente. ca debe dar cobertura para Gram nega-
tivos: aminoglucósido combinado con
piperacilina-tazobactam, un monobactá-
ÓRDENES MÉDICAS INICIALES mico o cefalosporina de tercera o cuar-
ta generación; evitar los antimicrobianos
• Vía oral: dieta líquida con electrolitos como inductores de betalactamasas.
suero casero, líquidos completos pero no • Protección de mucosa gástrica. La úlcera
jugos, bebidas gaseosas ni agua. Los líqui- duodenal y la hemorragia digestiva son com-
dos sin electrolitos están contraindicados plicaciones frecuentes en los pacientes con
en las primeras 48 horas por el riesgo de quemaduras de más del 20% de superficie
hiponatremia. corporal. El riesgo es mayor en los casos
• Líquidos endovenosos según se describió. con hipotensión por reanimación inadecua-
da, con trauma craneoencefálico o con coa-
• Averiguar si viene tomando medicamentos
gulopatía o falla renal asociada. La protec-
y ordenarlos.
ción de la mucosa gastrointestinal incluye
• Toxoide tetánico (Tetanol® Behringer) x 0,5
nutrición enteral temprana y antiácidos. El
cc aplicar 1 amp. IM.
antiácido más utilizado en nuestro medio es
• Globulina antitetánica humana (GATH)
la ranitidina, en dosis de 1 ampolla de 50
para inmunización pasiva:
mg endovenosa (EV) diluida a 50 mL para
cada 1 mL contiene 125 UI de gamma-globu- pasar en 20 minutos por buretrol cada 8
lina antitetánica humana. Su presentación es horas. Cuando no hay distensión y la tole-
en ampollas de 2 mL (250 UI) (Tetuman® o rancia a la dieta es adecuada, se inicia rani-
Tentanogama®), 1 amp. intramuscular en un tidina por vía oral 150 mg cada 12 horas.
glúteo diferente al que recibió el toxoide. • Analgésicos. El dolor por quemaduras es
• Antimicrobianos se suministran sólo en las muy intenso, tal vez uno de los peores en
siguientes situaciones: la práctica quirúrgica. La analgesia en el
- Contaminación severa de la quemadu- paciente quemado debe ser generosa; las
ra, por ejemplo si para apagarse se lan- dosis se deben espaciar de acuerdo con la
zó a un caño de aguas negras o se re- vida media del fármaco utilizado, de tal for-
volcó en la tierra. En estos casos los gér- ma que no queden espacios sin analgesia.
menes involucrados provienen de la flo- La farmacodependencia se produce más
ra ambiental: cocos Gram positivos y ba- frecuentemente por analgesia insuficiente
cilos Gram negativos; utilizar cefalos- que por el uso de opioides en dosis tera-
porina de primera generación o penicili- péuticas. La analgesia en el paciente con
na más aminoglucósido. quemaduras recientes se debe ordenar por
- Infección pre-existente, con riesgo para vía endovenosa (EV). El esquema analgé-
la quemadura, como piodermitis, otitis me- sico utilizado con más frecuencia es:

224
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

1. Analgésico no opioide. Ejemplos: anti-in- joules. La respuesta es generalmente


flamatorios no esteroideos (AINES) tipo buena al tratamiento farmacológico. Rara
COX-2, dipirona o acetaminofén. Se pue- vez se requiere cardioversión.
den combinar con un analgésico opioide. • Coluria. Si la orina tiene aspecto colúrico o
2. Analgésicos opioides. Los analgésicos se trata de quemadura eléctrica, aplicar
opioides utilizados con más frecuencia son: manitol, 25 gramos iniciales (Osmorin® al
- Morfina. Ampollas x 10 mg. Dosis: 0,05 20%, 125 mL) y agregar otros 12,5 gramos
a 0,1 mg/kg IV diluídos. Se repite la do- por cada litro de LEV ordenado. En estos
sis cada 4 horas. casos la diuresis se debe mantener en 100
- Meperidina (demerol) ampollas x 100 mg. mL/hora en el adulto y 2 mL/kg en los niños,
Se considera analgésico de segunda lí- para prevenir el depósito de mioglobina y
nea debido a los metabolitos y al efecto la falla renal subsecuente. No ordenar ma-
cardiodepresor. Dosis: 1 mg/kg IV dilui- nitol sin LEV, porque se induce deshidra-
dos. Se repite la dosis cada 4 horas. tación iatrogénica.
• Trombosis venosa profunda y tromboembo-
Si el paciente exige más analgésicos o está lismo pulmonar: los pacientes ancianos con
inquieto, a pesar de dosificación apropiada, quemaduras en las piernas, o con poca po-
sibilidad de movilización por estar bajo seda-
se debe sospechar hipoxia, hipovolemia o am-
ción y en ventilación mecánica, deben recibir
bas. Pueden ser causas de dolor las vendas
heparina de bajo peso molecular en dosis
demasiado ajustadas o una arruga en el col-
profilácticas. En todos los pacientes se de-
chón de un paciente con capacidad limitada
ben aplicar medidas universales de profilaxis.
para movilizarse. • En sospecha de quemaduras por inhalación,
se deben solicitar gases arteriales y radio-
• Quemaduras eléctricas. Tienen dos riesgos grafía de tórax, practicar laringoscopia di-
asociados: las arritmias cardíacas y la mio- recta y con base en ésta decidir la intuba-
globinuria; pueden no estar presentes o no ción orotraqueal, que debe ser precoz y con
ser notorias cuando el paciente ingresa. Se el tubo del mayor calibre posible, que per-
debe realizar ECG y ojalá establecer monito- mita aspiración adecuada. La radiografía del
rización cardiaca continua. Si hay arritmias, tórax permite identificar lesiones asociadas,
iniciar tratamiento antiarrítmico, el cual no pero tiene escaso valor predictivo para in-
debe ser suspendido sin ECG de control. halación. Si es necesaria, se toma cuando
• Manejo de arritmias. Lidocaína al 2% sin el paciente se encuentre estabilizado, o des-
epinefrina (cardiológica) 3 mL IV en dos mi- pués de colocar el catéter venoso central.
nutos, cada 15 minutos por tres dosis. Lue- • Exámenes de laboratorio de ingreso: hemo-
go lidocaína al 2% sin epinefrina (cardioló- grama, creatinina, electrolitos y sedimento
gica) 30 mL disueltos en 100 mL de dex- urinario. Además, si es mujer en edad fértil,
trosa en agua destilada (DAD) al 0,5%. El prueba de embarazo.
goteo se mantiene entre 10 y 40 mL por • Si es mayor de 50 años, ECG, radiografía
hora durante 48 a 72 horas mínimo. En ni- de tórax y glicemia.
ños se aplican bolos de 0,5 a 1 mg/kg IV. • Si es quemadura eléctrica, ECG, CPK y
Si no hay respuesta se debe realizar CKmb. A las 24 horas se repiten el uroaná-
cardioversión sincronizada a 2 joules/kg en lisis y la CKmb.
niños de hasta 25 kg (1 joules = 1 watt). En • Si el índice de Pronóstico es mayor de 100
adultos se inicia con 50 joules, y si no hay puntos, se agregan PT, PTT, albúmina séri-
respuesta se incrementa a 100, 200 y 360 ca, proteínas totales, calcio y fósforo.

225
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Si hay sospecha de inhalación o riesgo de los pacientes y a largo plazo, también deter-
insuficiencia respiratoria, Rx de tórax y mina el resultado de la cicatriz. El procedimien-
gases arteriales. to para las fases inicial y subsecuente se des-
cribe en el cuadro 5.

EXÁMENES DE CONTROL La resección temprana del tejido quemado y


los injertos precoces se consideran prácticas
• Si el Índice de Pronóstico es <100 puntos, estándar en todas las unidades de quemados;
hemograma y creatinina sérica al tercer día se recurre a la resección de la escara o esca-
y luego cada semana. rectomía cuando la quemadura es de espesor
• Si el índice es >100 puntos, hemograma, total, a las excisiones tangenciales cuando son
electrolitos básicos (sodio, potasio, cloro) quemaduras de espesor parcial y a la dermo-
y creatinina al segundo día y luego dos abrasión en lesiones muy superficiales. Las
veces por semana. resecciones mecánicas son muy dolorosas y
• Si es menor de 5 años de edad, sin impor- requieren anestesia o sedación adecuada.
tar el índice, se agrega examen de sedi- Cuando la sedación no es posible o se trata
mento urinario cada semana. de pacientes ambulatorios o cuyas quemadu-
• Si está en cuidado Intensivo, glucometría ca- ras no son extensas, se puede recurrir a la
da 6 horas; hematocrito, electrolitos básicos maceración o al desbridamiento enzimático.
y gases arteriales diarios; creatinina, calcio,
magnesio y fósforo dos veces a la semana. Cuando las quemaduras son de espesor inter-
medio o profundo, el tejido necrótico debe ser
resecado tan pronto las condiciones del pacien-
MANEJO DE HERIDAS te lo permitan, pues este tejido tiene alta posibi-
lidad de contaminación y posterior putrefacción.
En la piel quemada, las etapas de cicatriza-
ción se cumplen en plazos bien conocidos que Después de los procedimientos de resección
dependen de la profundidad de la lesión y los se procede a cubrir la herida. Las quemaduras
resultados de su tratamiento. superficiales libres de infección o contamina-
ción epitelizan en forma espontánea en plazo
La profundización de una quemadura, es de- inferior a dos semanas; mientras tanto, se de-
cir la transformación de quemadura superficial ben cubrir con tópicos antimicrobianos, cober-
en una más profunda, es complicación muy turas cutáneas o una combinación de ambos.
frecuente, y debe ser considerada como fra-
caso de la terapia tópica; el problema que ge- Las coberturas cutáneas se pueden aplicar
nera la profundización más rápidamente es la sobre una superficie cruenta pero libre de in-
infección que, en la superficie quemada, tie- fección, y preferiblemente también libre de
ne la capacidad potencial de destruir la der- tejido quemado. Son muy útiles en las que-
mis no quemada, con base en la cual se debe maduras superficiales, porque representan un
producir la epitelización. manejo muy simple y porque además supri-
men gran parte del dolor. En las quemaduras
Por lo anterior, el tratamiento adecuado de la más profundas evitan la desecación y permi-
herida es de capital importancia y urgencia en ten la preservación de restos dérmicos. De
el paciente quemado, pues reduce las probabi- esta manera se reduce la necesidad de injer-
lidades de infección y mejora la sobrevida de tos y por lo tanto se mejora el pronóstico. Las

226
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

CUADRO 5. TÉCNICA BÁSICA DE MANEJO INICIAL DE LA HERIDA EN QUEMADURAS


- En quemaduras químicas por ácido o álcali, se debe lavar con agua abundante, mediante ducha tibia, por lo menos durante 120
minutos. A continuación se puede proceder como una quemadura ordinaria. Son excepciones a esta regla las quemaduras por
sodio, potasio, litio y ácido sulfídrico, en las cuales la aplicación de agua tiene el riesgo de generar una quemadura adicional.
- El cirujano debe usar vestido quirúrgico, mascarilla, gorro y guantes. Es preferible trabajar con instrumentadora. En este caso la
instrumentadora usa bata quirúrgica y el cirujano sólo vestido, sin blusa. Los guantes se deben cambiar las veces que sea
necesario durante el procedimiento.
- Asegurar alguna forma de monitoría. Ideal: pulsoxímetro, Dinamap, cardioscopio y capnógrafo.
- Aplicar el analgésico, la sedación o la anestesia según el caso.
- No encender el aire acondicionado para prevenir la hipotermia.
- Retirar toda la ropa, anillos y brazaletes en la primera sesión.
- Rasurar el cabello alrededor de la lesión.
- Retirar la tierra o cuerpos extraños adheridos a la superficie quemada.
- Aspirar las ampollas más grandes con jeringa y aguja estériles. Si se rompen accidentalmente se debe dejar la epidermis como
apósito biológico. Las ampollas muy pequeñas se pueden dejar intactas. Este líquido es un caldo de cultivo para las bacterias.
- Lavar con yodóforo diluido en solución salina estéril (Isodine® o Clorexidina® jabón o espuma). Dejar en contacto durante un
minuto, luego lavar el yodóforo para evitar la acidosis metabólica y la citotoxicidad.
- Secar con compresas estériles.
- Aplicar sulfadiazina de plata con lidocaína 200 mg. La aplicación se realiza con guantes estériles. Después de 2 semanas si no
hay mejoria evidente se debe cambiar el agente tópico.
- Cubrir con gasa vaselinada estéril.
- En las extremidades envolver con plástico, preferible estéril, para ayudar a macerar el tejido necrótico.
- Cubrir todas las áreas con compresas de quemados, o rollos abdominales y vendas elásticas o Elastomul®. A continuación
cubrir con malla, si está disponible.
- Si existen quemaduras de tronco envolver con una sábana o campo estéril desde las axilas hasta el pubis.
- Cubrir la cara con una máscara de compresas.
Asegurar toda la cobertura con tela adhesiva.

coberturas cutáneas de uso más frecuente se co mas utilizado en casi todas las Unidades
describen en el cuadro 6. de Quemados es la sulfadiazina de plata.

El tópico antimicrobiano debe cambiarse an- RECOMENDACIONES DE MANEJO


tes de 16 días o en cualquier momento que SEGÚN TIPO DE QUEMADURA
se observe falta de respuesta terapéutica. Los
tópicos mas utilizados así como las caracte- Quemadura Grado 2 superficial. Pacientes
rísticas de cada uno de ellos se describen en con vesículas de pequeño tamaño, o sin ve-
el Cuadro 7. sículas inicialmente pero con formación pos-
terior de vesículas de menos de 2 cm de diá-
Las quemaduras más profundas requieren la metro. El epitelio de la vesícula se debe pre-
aplicación de injertos, preferiblemente autólo- servar, pues evita la desecación de la herida
gos, apenas la superficie cruenta se encuen- y permite epitelización más rápida con cica-
tre en capacidad de recibirlos, es decir, limpia triz final de mejor calidad.
y con tejido subyacente viable, de preferen-
cia tejido de granulación. El propósito debe Se recomienda lavar la herida con solución
ser injertar todas las superficies antes de 21 salina estéril hasta que está completamente
días, si las condiciones lo permiten. La técni- limpia, y aplicar sulfadiazina de plata o gasa
ca básica se describe en el Cuadro 5. El tópi- impregnada con clorhexidina (Bactigras R). Cu-

227
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CUADRO 6. COBERTURAS CUTÁNEAS DE USO FRECUENTE


Cobertura Ventajas Desventajas
Poliuretano Bajo costoPermite inspección visual DermatitisInfección
Silicona Inerte Costo
Colágeno Fácil de aplicarAdherencia moderadaInerte Costo
Piel porcina Disponibilidad Alergia
Piel homóloga Bien tolerada Costo

CUADRO 7. TÓPICOS MÁS FRECUENTEMENTE UTILIZADOS. VENTAJAS Y LIMITACIONES


Tópico Ventajas Limitaciones
Sulfadiazina de plata Microbicida, amplio espectro Costoso, neutropenia
Nitrato de Plata 0.5% Microbicida, amplio espectro Escasa penetración de la escara.
Trastornos electrolíticos
Nitrofurazona Microbicida Alergia. Poco activo para Gram (-)
Mafenide crema Microbicida, penetra la escara Doloroso, costoso
Mafenide solución 5% Microbicida, penetra la escara Costoso
Clorexidina Microbicida Costoso. Absorción en grandes intervenciones
quirúrgicas.
Fenoles 2% Microbicida, no es costoso Corrosivo
Colagenasa Agente desbridante enzimático No es antimicrobiano
Hidrogel con Pectina Agente desbridante autolítico No es antimicrobiano
Oxido de Zn-Calamina Fomenta la epitelización No es antimicrobiano

brir con apósito simple o hidroactivo y venda • Resección mecánica, la cual se obtiene
liviana que lo sostenga. La herida se debe re- mediante excisión tangencial o dermoabra-
visar cada 72 a 120 horas (3 a 5 días) para sión. Procedimiento doloroso, requiere
comprobar que la epitelización es adecuada anestesia, anestesia tópica y analgesia
y que no existen signos de infección. postoperatoria.
• Desbridamiento enzimático, para lo cual se
Una alternativa es la cobertura cutánea, como utiliza colagenasa o pectina.
colágeno o colágeno-silicona (Biobrane R), la • Desbridamiento mecánico pasivo o mace-
piel porcina o el homoinjerto. Se aplican so- ración. Se consigue aplicando un plástico
bre el área lesionada y se dejan in situ hasta estéril sobre el área quemada, o bien va-
que se desprenden en forma espontánea. Se selina sólida o ambas cosas.
revisan cada 72 horas por la posibilidad de
infección, ante cuya sospecha se deben reti- Cuando se realiza este tipo de procedimiento,
rar para cambiar la técnica. la revisión se debe hacer entre 24 y 48 horas,
preferiblemente cada 36 horas. En cada revi-
Quemadura Grado II intermedio o AB. Si es sión se debe revaluar el área, a efecto de apli-
reciente sin antecedentes ni signos de conta- car la técnica apropiada de acuerdo con el re-
minación, el tejido necrótico se debe resecar sultado de la inspección visual. En las revisio-
y para el efecto existen las siguientes alterna- nes de los siguientes días, se puede observar:
tivas (Cuadro 8):

228
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

CUADRO 8. MANEJO DE ÁREAS DE ESPESOR INTERMEDIO


Procedimiento Ventajas Limitaciones
Excisión tangencial Resección total.Bacteremia mínima. Requiere Anestesia general.
Requiere entrenamiento.
Puede resecar áreas sanas.
Dermoabrasión Resección total. Requiere anestesia general.Produce bacteremia.
Colagenasa/Pectina Aplicación indolora.Desbridamiento No indicado en infección. No sirve en escaras
selectivo. gruesas
Maceración Aplicación indolora.No es costoso. Desbridamiento muy lento. Debe combinarse
con otra técnica.

• Áreas que empiezan a epitelizar. Estas 1. Escarectomía. Resección del tejido necró-
áreas no requieren de nuevas resecciones, tico o escara con electrobisturí para mini-
dermoabrasiones o desbridamientos. Se mizar las pérdidas sanguíneas. En nuestro
deben cubrir en ese momento con un tópico medio se ha establecido el límite de resec-
de acción antimicrobiana mínima como ción en una hora de cirugía y dos unidades
clorhexidina o calamina-óxido de zinc (Bota de glóbulos rojos; la intervención se debe
de Unna), o con una membrana de cober- detener cuando se sobrepase cualquiera
tura cutánea. La revisión se lleva a cabo de estos parámetros y proceder en etapas
cada 72 horas. secuenciales hasta completar la resección
• Áreas de espesor más profundo que no epi- de todo el tejido necrótico.
telizan en los primeros 15 días, es preferi- 2. Excisión tangencial. Resección sucesiva
ble injertarlas, pues la cicatriz será de muy de porciones del área lesionada hasta en-
mala calidad: cicatriz hipertrófica o retrac- contrar tejido vivo sangrante. En grandes ex-
ción que requiera tratamiento quirúrgico; en tensiones se prefiere utilizar un dermátomo
zonas de pliegues, cuello o cara dorsal de tipo Brown. En extensiones menores es su-
manos y pies, se prefiere el injerto precoz. ficiente con un dermátomo manual o una
cuchilla de afeitar “montada” en una pinza
Quemaduras de espesor total. Diagnostica- intestinal o en una pinza de Rochester recta.
das de acuerdo con los signos descritos pre- 3. Incisiones paralelas cruzadas o cuadri-
viamente, deben ser resecadas tan temprano culación. Cuando no es posible la escarec-
como sea posible. No realizar la resección y tomía o excisión tangencial por inestabilidad
esperar su desprendimiento espontáneo cau- del paciente o por falta de apoyo logístico,
sa riesgo de infección por debajo de la escara una alternativa fácil es practicar cortes sepa-
que es proporcional a la extensión de la que- rados aproximadamente a 1 cm unos de otros,
madura y al estado inmunológico del paciente. para cuadricular la escara. Este procedi-
miento impide la acumulación de material
RESECCIÓN MECÁNICA purulento por debajo de la escara y además
permite maceración y resección más fácil.
El propósito es reducir la carga bacteriana, y
para el efecto se utilizan la resección mecánica QUEMADURAS CIRCULARES
del tejido necrótico tan pronto lo permiten las
condiciones hemodinámicas del paciente, y la Las quemaduras circulares localizadas alre-
aplicación subsecuente de tópicos. Las técnicas dedor del tórax limitan el movimiento y por lo
de resección mecánica son las siguientes: tanto producen menor capacidad de expan-

229
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sión, aumento de la presión en la vía aérea y Además de estos signos, algunos gérmenes
como consecuencia, hipoventilación. En los tienen características propias que es importan-
casos más severos pueden llegar a causar te detectar porque permiten diagnóstico clíni-
hipoxemia y retención de CO 2 que requieren co antes de que se obtengan los resultados
asistencia ventilatoria mecánica. El manejo de del laboratorio. Los más frecuentes son:
estas lesiones incluye la realización de escaro-
tomía, sección de la piel quemada hasta lle- a. Pseudomonas aeruginosa. Aparición de
gar a tejido viable. Los cortes longitudinales leucopenia y progresión muy rápida hacia
se deben realizar sobre la línea axilar anterior Sindrome Sistémico de Respuesta Inflama-
en dirección a la espina ilíaca anterosuperior, toria (SIRS) y de Disfunción Múltiple de
pero sin llegar hasta ella, para evitar su expo- Órganos (SDOM). Si el recuento de leuco-
sición. El corte transversal se debe realizar citos aparece “normal” o “ligeramente dis-
por debajo del apéndice xifoides. minuido”, se deben buscar en la herida los
signos propios de este germen que son:
Las quemaduras circulares localizadas en las - Tejido de color gris o violáceo.
extremidades pueden producir oclusión veno- - Punteado hemorrágico de aspecto
sa y edema que a su vez produce mayor oclu- petequial.
sión vascular, hasta generar isquemia distal y - Fluorescencia positiva.
necrosis. - Olor característico.

El tratamiento consiste en liberar el túnel car- b. Estafilococo aureus. De evolución más


piano si la mano se encuentra comprometida y lenta, se caracteriza por leucocitosis en
realizar escarotomías mediante corte de la piel lugar de leucopenia. Las heridas infecta-
quemada hasta llegar a tejido viable. Estas esca- das por este germen se caracterizan por:
rotomías siguen las superficies laterales de las - Palidez del tejido de granulación.
extremidades (figuras 2 a 6). En los dedos se - Tejido de granulación deprimido.
realiza la liberación en los bordes laterales inter- - Aparición de pústulas o comedones.
nos, se trata de conservar indemnes la superfi- c. Signos sistémicos de infección. Se de-
cie radial del primer dedo y la ulnar del quinto ben tener en cuenta:
para evitar la cicatriz sobre áreas de apoyo. Conciencia. El paciente con quemaduras
extensas sufre una serie de trastornos sico-
lógicos bien conocidos, pero el Glasgow se
TRATAMIENTO DE LA INFECCIÓN debe mantener en 15 ó en 11 si está intu-
LOCAL bado. La alteración de la esfera mental sin
causa justificada debe hacer pensar en in-
Signos locales de infección. Se consideran fección hasta que se demuestre lo contra-
signos locales de infección los siguientes: rio. Si el paciente recibe medicación siquiá-
trica, se debe suspender esta medicación
• Eritema alrededor del borde del área que- y en todo caso suponer que el trastorno es
mada. de origen metabólico y no medicamentoso.
• Costra difícil de desprender o adherencia Signos vitales básicos. Se consideran
de cualquier color. signos de infección los siguientes:
• Mal olor u olor a gérmenes específicos. - Tensión arterial. Caída no justificada de
• Falta de mejoría con el tratamiento usual. la Presión Arterial Media en 10 mm Hg
• Profundización de la herida. o más; esa tendencia a bajar es medida

230
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

Figura 2

Figura 5
Figura 3

Figura 4 Figura 6

231
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

muy sensible de vasodilatación, la cual - Leucocitosis: los pacientes quemados tie-


por su parte supone la migración de pro- nen glóbulos blancos un poco por encima
ductos de degradación al lecho vascular de las cifras normales, entre 11.000 y
sistémico. 13.000. Valores por encima de 15.000 se
- Temperatura. Los pacientes quemados, consideran anormales y deben obligar a la
por hipermetabolismo suelen tener 37.5° búsqueda de algún foco. La leucocitosis en
centígrados más o menos 3 décimas. El estos pacientes significa área de necrosis
aumento o disminución de más de 1ºC o sin resecar o infección por cocos Gram
las temperaturas por encima de 38°C son positivos, específicamente estafilococos.
indicaciones de foco infeccioso no resuel- - Leucopenia. Es particularmente ominosa la
to. Es de particular importancia la hipo- caída brusca del recuento de glóbulos blan-
termia, por debajo de 36,5°, que obliga a cos. Por ejemplo un hemograma con re-
buscar un germen Gram negativo. cuento leucocitario de 6.000 y neutrófilos
- Respiración. Más de 10 respiraciones por de 87% parece aceptable para una perso-
minuto indican infección respiratoria y na sin quemaduras. Sin embargo, en un
sospecha de quemadura por inhalación. paciente quemado es una cifra baja; y si
d. Gasto urinario. La disminución de la diu- en este paciente 48 horas antes el leuco-
resis a pesar de un suministro de líquidos grama mostraba leucocitosis, por ejemplo
de acuerdo a las estimaciones calculadas, de 15.000 y 85% de neutrófilos puede sig-
debe hacer suponer que se está gestando nificar leucopenia y neutropenia en curso.
un tercer espacio, o que existe vasodilata- Si el paciente no recibió sulfadiazina como
ción. En ambos casos el origen de estos agente tópico, entonces probablemente
fenómenos es la infección. está en proceso de sepsis por Gram nega-
e. Signos gastrointestinales. Son signos de tivos; los más frecuentes en la herida que-
infección no controlada: mada son las Enterobacteriáceas, y de
- Intolerancia a la nutrición enteral. éstas Pseudomonas aeruginosa y Acine-
- Ileo sin lesión de vísceras abdominales. tobacter baumanni.
- Diarrea de causa no justificada. - Trombocitopenia. Tendencia a la baja o
- Hemorragia digestiva. cualquier recuento con menos de 100.000
plaquetas por mm3.
Exámenes de laboratorio. Hemograma, elec- - Hemocultivo. Puede resultar positivo por
trolitos y creatinina dos o tres veces por sema- bacteremia transitoria debida a la manipu-
na. La glicemia se debe monitorizar con gluco- lación del área cruenta, o bien a conse-
metría. cuencia de diseminación de gérmenes des-
- Hemograma. Los neutrófilos tienen vida de catéteres; en la mayoría de los casos,
media de 8 a 9 horas. Por este motivo, las sin embargo, tiene o tuvo origen en un área
cifras del leucograma se deben interpretar quemada infectada. Los hemocultivos po-
con cautela. Sin embargo, y por este mis- sitivos en el paciente quemado no se de-
mo hecho el leucograma es una prueba ben interpretar como contaminación, a me-
muy sensible que permite detectar en for- nos que el estado general del individuo sea
ma temprana un proceso infeccioso. excelente. Debido al intenso grado de inmu-
nosupresión presente, un hemocultivo po-
Se consideran signos de infección: sitivo generalmente es indicación para ini-
- Caída del hematocrito en 2 puntos o más ciar tratamiento antimicrobiano específico.
en ausencia de hemorragia.

232
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

SOPORTE METABÓLICO Mujeres: 665,1+9,56 (kg) + 1,85 (cm) – 4,68 (años)


Hombres: 66,47 + 13,75 (kg) + 5,0 (cm) – 6,76 (años)
Las tasas metabólicas de los pacientes que-
mados pueden ser el doble o más del doble Se deben aplicar factores de estrés, porque
de un paciente normal, lo cual explica la gran la fórmula no los considera y los cálculos basa-
pérdida de masa muscular en los días siguien- les subestiman las necesidades calóricas de
tes a la quemadura. Además se deteriora la los pacientes quemados. Los factores de
producción de anticuerpos y la respuesta estrés sugeridos según porcentaje de quema-
celular específica. En la práctica clínica, cuan- dura son los siguientes:
do se encuentra un paciente con evolución tór-
pida o con retroceso en su evolución a pesar <20% 1,2-1,4
de tratamiento aceptable, la primera hipóte- 20-25% 1,6
sis de trabajo debe ser revisar el estado y el 25-30% 1,7
manejo nutricional del individuo. 30-35% 1,8
35-40% 1,9
La American Burn Association (ABA) propone >40% 2,0
las siguientes opciones:
La ecuación de Curreri y la de Curreri pediá-
1. La nutrición debe ser preferiblemente ente- trica (junior) son las siguientes:
ral, siempre que sea posible.
2. Se debe iniciar desde la fase aguda de re- Adultos:
cuperación. (25 x kg) + (40 x % Superficie Quemada)
3. En pacientes con quemaduras de mas del Niños:
20% de superficie corporal, la relación ca- <1 año: kilocalorías basales (RDA) + 15
lorías/nitrógeno debe ser 110:1 ó menor. kilocalorías x % quemaduras
4. La nutrición mediante sonda postpilórica se 1-3 años: kilocalorías basales + 25 kilocalo-
puede utilizar durante los periodos pre, intra rías x % quemaduras
y postoperatorio sin riesgo significativo de 4-15 años: kilocalorías basales + 40 kiloca-
broncoaspiración. lorías x % quemaduras.

La mayoría de las unidades de quemados, in- CÁLCULOS DE REQUERIMIENTOS


cluyendo las de los países desarrollados, con-
tinúan utilizando las fórmulas y comparan sus 1. Proteínas. Los requerimientos proteicos se
cálculos con la evolución del paciente, los re- incrementan debido a las necesidades de
sultados de los estudios o con métodos alter- cicatrización de la herida, hasta 2,0 a 2,5
nativos que permitan calcular el gasto energé- gramos por kilo de peso corporal y por día y
tico. Las fórmulas más utilizadas son la ecua- hasta 3,0 ó 4,0 gramos por kilo diario en los
ción modificada de Harris-Benedict y la fór- niños. Un aporte mayor no ayuda al pacien-
mula de Curreri. te y puede ser perjudicial, si hay falla renal.
La relación calorías/nitrógeno debe ser
La ecuación de Harris-Benedict predice las 1:100 o menor; se prefiere la ruta enteral.
necesidades energéticas basales con base en 2. Carbohidratos. La herida por quemadura
el sexo, el peso en kilos, la estatura en centí- sólo puede utilizar glucosa como fuente
metros y la edad en años. Las fórmulas son energética y no puede usar fuentes alter-
las siguientes: nativas.

233
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Pueden ser necesarios unos 7 gramos por kilo 1. Suministrar los alimentos a tiempo y en un
al día, alrededor de 2.000 kilocalorías para un entorno adecuado.
individuo de 70 kilos. La complicación más fre- 2. Eliminar las distracciones, tales como la te-
cuente en la nutrición de los pacientes que- levisión.
mados es la intolerancia a la glucosa. 3. Estimular pero no obligar a comer.
3. Lípidos. La recomendación usual es sumi- 4. Reforzar los comportamientos adecuados
nistrar 15 a 30% de las calorías en forma de e ignorar la conducta negativa.
grasa, es decir 1 a 2 gramos de lípidos por 5. Educar al personal y a los padres respecto
kilo y por día; los ácidos omega 3, que se de los planes de intervención nutricional.
encuentran principalmente en el aceite de
pescado y algunos productos marinos, pa-
recen tener efecto benéfico sobre la inmu-
APOYO PSICOLÓGICO
nocompetencia en los pacientes quemados. Y PSIQUIÁTRICO
4. Micronutrientes. Se denominan micronu- 1. Apoyo psicológico. Es importante en tres
trientes a las vitaminas y los elementos tra- tareas básicas:
za. Los requerimientos exactos de vitami- a. Manejo del dolor tanto físico como emo-
nas en pacientes quemados no han sido cional.
definidos. Por esta razón se considera que b. Manejo de la hospitalización y el trata-
el aporte debe incluir por lo menos las re- miento.
comendaciones de los requerimientos mí- c. Adaptación posterior a la hospitalización.
nimos diarios (RDA). De estos los más im- Lo ideal es que sea dado por psicólogo pro-
portantes para el paciente quemado son: fesional, quien debe atender al paciente
1. Vitamina A. Es factor importante en la ci- desde su ingreso. Sin embargo, la ausencia
catrización de las heridas y en el creci- de este profesional no impide que el resto
miento epitelial. Se recomienda suminis- del equipo realice las acciones básicas ten-
trar 3.000 microgramos por día en el adul- dientes a evitar o minimizar las complica-
to y dosis proporcionales en los niños. ciones inherentes. Para el efecto se utiliza
La sobredosis puede producir toxicidad. un esquema de trabajo inicial, el cual se
2. Vitamina C. Se recomienda suministrar incluye en la Tabla 9.
1.000 mg (1 gramo) diario de vitamina La terapia ocupacional se realiza en los pa-
C en el paciente quemado, es decir 20 cientes con hospitalizaciones prolongadas
veces las recomendaciones de la RDA o que muestren síntomas de depresión.
(Recommended Dietary Alowance).
3. Zinc. Se recomienda un suplemento de 2. Apoyo psiquiátrico. Se solicita intercon-
200 mg diarios, es decir 15 veces la ci- sulta al psiquiatra cuando no es posible
fra de requerimientos mínimos. manejar el paciente con las técnicas de
psicología convencionales. En general es-
tas situaciones son:
Las proporciones de macronutrientes general-
- Reacciones de adaptación.
mente aceptadas en pacientes quemados son:
- Psicosis.
Carbohidratos 50-55%
- Trastornos de angustia.
Grasa 20-25%
- Trastornos depresivos.
Proteínas 15-20%
- Delirio.
Los pacientes quemados son inapetentes. Co- El cuadro que requiere intervención más ur-
mo estrategia en tal caso, White y Kamles han gente es el de agitación por delirio; se debe
sugerido: descartar la presencia de sepsis y la hipoxemia.

234
CAPÍTULO XX: QUEMADURAS

CUADRO 9. MANEJO PSICOLÓGICO DURANTE LA FASE INICIAL (PRIMERAS 72 HORAS)


• Información de la naturaleza, grado y extensión de la lesión y su tratamiento.
• Recomendaciones importantes iniciales.
• Intervención familiar ante dificultades emocionales producidas por la lesión.
Intervención inicial dirigida al paciente Incluye:
• Explicación rápida de su estado de salud y el plan de tratamiento a seguir.
• Intervención psicológica para minimizar el impacto emocional inicial.
Adaptado de: Obando L. Manejo Psicológico del paciente quemado. Protocolo Unidad de Quemados. Hospital Universitario del
Valle, Cali, Colombia.

REHABILITACIÓN 9. Ferrada R. Infección en Quemaduras. Rev Colomb


Cirugía 1996; 11:2-8.
Se debe iniciar desde el momento en que los 10. Ferrada R. Manejo del paciente quemado grave. En:
Cuidado Intensivo y Trauma. Editado por C Ordoñez
parámetros hemodinámicos y respiratorios se C, R Ferrada, R Buitrago. Distribuna. Bogotá, 2002.
estabilicen. La rehabilitación del paciente que- 11. Gang RK, Bang RL, Sanyal SC, et al. Pseudo-
mado comprende terapia respiratoria, férulas monas aeruginosa septicaemia in burns. Burns
1999; 25:611-616.
y posición para evitar retracciones y deforma- 12. Lee RC. Injury by electrical forces: pathophysio-
ciones, terapia física y presoterapia con logy, manifestations and therapy. Curr Probl Surg
“lycra”, para evitar la aparición de queloides y 1997; 34:681-764.
mejorar la calidad de la cicatriz. 13. Mayes T, Gottschlich M, Warden G. Clinical
nutrition protocols for continuous quality improve-
ment in the outcomes of patients with burns. J Burn
Care Rehabil 1997; 18:365-368.
LECTURAS RECOMENDADAS 14. Moore FD. Then and now: treatment volume,
wound coverage, lung injury, and antibiotics: a
1. American Association for Burn Injuries. Advanced capsule history of burn treatment at mid-century.
Burn Life Support. Core Course, 1985. Burns 1999; 25:733-737.
2. American Burn Association. Burn shock resuscita- 15. Patiño JF. Quemaduras. En: Lecciones de Ciru-
tion. Initial management and overview. J Burn Care gía. Por JF Patiño. Editorial Médica Panamerica-
Rehabil Practice Guidelines. April 2001; 27S-37S. na. Buenos Aires, Bogotá, 2001.
16. Powers P, Cruse C, Boyd F. Psychiatric status, pre-
3. American Burn Association. Guidelines Commi-
vention and outcome in patient with burns: a pros-
ttee. Initial assessment of the burn patient. J Burn
pective study. J Burn Care Rehabil 2000; 21:85-88.
Care Rehabil 2001; 1S, 5S, 59S.
17. Pruitt B, Goodwin C, Mason A. Epidemiological, de-
4. Briggs S, Purdue GF, Hunt JL, Ferrada R. Lesio- mographic and outcome characteristics of burn inju-
nes Térmicas. En: Trauma. Editado por A Rodrí- ry. En: Total Burn Care. Editado por D Herndon. Se-
guez, R Ferrada, Sociedad Panamericana de Trau- cond edition. WB Saunders Co. Philadelphia, 2002.
ma. Feriva, Cali,1997. 18. Pruitt B, MacManus A, Kim S, Goodwin C. Burn
5. American College of Surgeons. ATLS, Programa wound infections: Current status. World J Surg
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi- 1998; 22:135-145.
cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole- 19. Ramírez C, Rivera J, Cabezas M. Manejo de Que-
gio Americano de Cirujanos. Chicago, 1997. mados. Guías de práctica clínica basadas en la
6. Demling RH. Burn care in the early postresusci- evidencia. Proyecto ISS-ASCOFAME. 1998.
taion period. ACS Surgery. Principles & Practice. 20. Ryan CM, Schoenfeld D, Thorpe WP. Objective
Edited by DW Wilmore et al. American College of estimates of the probability of deaths from burn
Surgeons. WebMD New York, 2002. injuries. N Engl J Med 1998; 338:362-366
7. Dickerson A, Gervasio J, Riley M, et al. Accuracy 21. Schierhout G, Roberts I. Fluid resuscitation with
of predictive methods to estimate resting energy colloids or crystalloids solutions in critically ill
expenditure of thermally-injured patients. JPEN patients: a systematic review of randomised trials.
2002; 26:17-29. BMJ 1998; 316:961-964.
8. Ferrada R. Trauma e infección. Rev Colomb Cir 22. Xiao J, Cai BR. A clinical study of electrical inju-
1992; 7:90 100. ries. Burns 1994; 20: 340-346.

235
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXI

Ruptura del esófago

Fernando Guzmán Mora, MD, IGACS


Jefe, Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

Luis Gerardo Garcia-Herreros, MD


Jefe Asociado, Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l esófago puede lesionarse por cualquie-


ra de los mecanismos que producen trau-
ma, como herida penetrante con instrumento
daria a la introducción de sondas y endos-
copios. Según Chon, las lesiones iatrogénicas,
en su serie de 1982 a 1988, fueron la causa
cortopunzante, arma de fuego, trauma cerra- del 50% de las lesiones del esófago. Hay au-
do, quemadura o por iatrogenia. tores que muestran estadísticas aún más pe-
simistas.
A pesar de los avances que permiten un mejor
diagnóstico y un tratamiento quirúrgico más Existen otras causas de lesión esofágica, en-
oportuno y enérgico, la rata de mortalidad no tre ellas la ruptura espontánea (Síndrome de
ha cambiado en los últimos años; permanece Boerhave) y los cuerpos extraños.
alrededor de 20%, debido en particular a las
lesiones asociadas de órganos vecinos en el Cuando se presenta la ruptura esofágica, la
cuello, el tórax o el abdomen. presión negativa intratorácica tiende a sacar
el contenido luminal hacia el espacio pleural
Las lesiones del esófago por sustancias quími- y el mediastino. Este material, mezcla de ali-
cas ocurren principalmente en los adultos, quie- mentos, saliva y jugo gástrico, produce que-
nes las ingieren generalmente con intención de maduras químicas y contaminación masiva de
suicidio y, en raras ocasiones, por accidente. estos espacios, con rápida evolución hacia la
sepsis generalizada.
Se han descrito muchas sustancias causan-
tes de quemaduras químicas del esófago; ge- Las lesiones torácicas por trauma, de acuer-
neralmente son productos caseros que con- do con sus complicaciones inmediatas, pue-
tienen cáusticos como el hidróxido de sodio o den ser clasificadas en tres grupos, a saber:
de potasio, agentes utilizados en la desinfec-
ción de conductos y tuberías en el hogar. 1. Rápidamente letales, que producen la
muerte instantánea o en pocos minutos.
En la actualidad la causa más frecuente de Estas incluyen: obstrucción de la vía aérea,
lesión del esófago es la iatrogénica, secun- hemotórax masivo, taponamiento cardiaco,

240
CAPÍTULO XXI: RUPTURA DEL ESÓFAGO

neumotórax a tensión, neumotórax abierto craneoencefálico asociado, o por el estado de


y tórax inestable. embriaguez de muchos pacientes.

2. Potencialmente letales, en las que el 50% En casos tardíos puede encontrarse derrame
de los pacientes fallecen, la mitad en el cur- pleural unilateral o bilateral.
so de pocas horas (generalmente por he-
morragias) y el 20% restante en el curso Un factor decisivo en el éxito del diagnóstico de
de días, por sepsis o falla multisistémica. las lesiones del esófago es una adecuada his-
Ellas abarcan: contusión pulmonar, contu- toria clínica, en la que debe consignarse el me-
sión miocárdica, ruptura traqueobronquial, canismo de la lesión, el tiempo transcurrido, las
ruptura contenida de aorta, ruptura de dia- posibles lesiones asociadas y el estado general
fragma y ruptura del esófago. del enfermo, con énfasis especial en los siste-
mas nervioso, cardiovascular y respiratorio.
3. No necesariamente letales.
Otro factor decisivo en el resultado en cuanto
Se puede apreciar que la ruptura esofágica a morbilidad y mortalidad es la rapidez en
se halla entre las lesiones potencialmente le- hacer el diagnóstico. Como ha sido ya descri-
tales, pues la muerte en lesiones no tratadas to por Asencio y cols., cuando el tiempo de
ocurre en el término de horas a días. Sin em- evaluación preoperatoria aumenta, la morbi-
bargo, la severidad de estas lesiones es de lidad y la mortalidad lo hacen también.
tal magnitud que la mortalidad continúa siendo
muy alta, debido a la extensa contaminación En la radiografía simple de cuello o de tórax
de los espacios del tórax y su rápido progreso puede apreciarse aumento en el espacio retro-
a septicemia generalizada, con todas sus con- esofágico o enfisema cervical cuando la le-
secuencias metabólicas y sistémicas. sión se ubica en el tercio cervical. En casos
de ruptura de los tercios medio e inferior se
encuentran, con frecuencia, signos de neumo-
DIAGNÓSTICO tórax, hidrotórax y neumomediastino.

Se debe siempre sospechar lesión esofágica Si las condiciones del paciente lo permiten se
en toda herida penetrante del cuello y en lesio- debe practicar esofagograma con medio
nes cuyo trayecto incluya el mediastino hidrosoluble inicialmente y si no se demues-
posterior. tra lesión, completarlo con uno baritado para
observar su posible extravasación; siempre es
El trauma epigástrico puede romper el tercio preferible la definición dada por los estudios
inferior del esófago, caso en el cual se presen- baritados. De esta manera la sensibilidad es
ta dolor abdominal o torácico, enfisema subcu- del 80 al 90% y la especificidad del 95%.
táneo (más frecuente en ruptura del esófago
cervical), disfagia, hemorragia digestiva (poco Mediante endoscopia se puede detectar el
frecuente), fiebre, taquicardia y sepsis tempra- sitio de la lesión. Sin embargo, la sensibilidad
na secundaria a los factores anteriormente diagnóstica de este examen es un poco me-
mencionados. nor, entre 67% y 89% y la especificidad entre
90% yl 95%, a no ser que se use un esofa-
En la etapa aguda muchos casos aparecen goscopio rígido, con grandes medidas de pre-
asintomáticos, en parte porque hay trauma caución para evitar lesionar aún más el órga-

241
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

no, particularmente en pacientes politrauma- la herida. Las fracturas deben ser adecuada-
tizados, en los cuales existen limitaciones adi- mente inmovilizadas.
cionales de importancia.
Es necesario tener en cuenta la posibilidad
La tomografía axial computadorizada per- de lesión cervical y si ésta es evidente, el le-
mite identificar los pacientes con perforación sionado se debe movilizar adecuadamente,
esofágica y lo que es más importante, resol- evitando los movimientos de flexión y exten-
ver cuáles pacientes pueden ser tratados mé- sión del cuello mediante un collar de Thomas.
dicamente en casos de perforación intramural,
solamente con enfisema mediastinal y sin co- La hipotensión persistente por debajo de 100
lecciones en este espacio. mmHg de presión sistólica es indicación para
infusión de líquidos por una línea central, cate-
terización urinaria y transfusión sanguínea de
TRATAMIENTO tipo específico.

En casos de trauma el tratamiento inicial es Los siguientes grupos de pacientes deben ser
el que se brinda a cualquier paciente politrau- sometidos a toracotomía de urgencia:
matizado, según las normas del ATLS del Co-
legio Americano de Cirujanos. 1. Pacientes con severo deterioro cardiovas-
cular post-traumático:
La vía aérea se despeja y mantiene permea- a) Pacientes en paro cardiaco asociado a
ble. Si la ventilación es inadecuada, el pacien- trauma del tórax.
te debe ser intubado y ventilado. Es necesa- b) Pacientes con hipotensión progresiva y
rio descartar neumotórax abierto, neumotórax persistente a pesar del adecuado reem-
a tensión, tórax inestable y taponamiento plazo del volumen circulante y del es-
cardiaco. tricto control de la vía aérea en los ca-
sos de trauma penetrante del tórax.
Se debe realizar valoración global que incluya c) Pacientes con evidencia de taponamien-
los signos vitales, la calidad de perfusión de to cardiaco asociado a trauma cerrado
la piel, la auscultación de los dos campos pul- o penetrante.
monares, la observación de las venas del cue- 2. Pacientes con grandes defectos de la pa-
llo, del tórax y abdomen. Se debe buscar, eva- red torácica.
luar y tratar la hemorragia mayor al mismo 3. Escape masivo de aire intraparenquima-
tiempo que se practica una valoración neuro- toso.
lógica rápida (pupilas, reflejo pupilar, respues- 4. Lesión traqueobronquial demostrada.
ta verbal y motora). 5. Lesión esofágica demostrada.
6. Hemorragia constante por el tubo de tórax.
Deben canalizarse por lo menos dos venas 7. Heridas penetrantes del mediastino.
de buen diámetro y si el paciente se encuentra 8. Embolismo aéreo.
hipotenso, iniciar infusión rápida de cristaloi-
des, la cual se mantendrá hasta lograr cifras Cuando se sospeche lesión del esófago, es-
de tensión sistólica de 100 mmHg. pecial atención se debe prestar a la forma-
ción de hematomas cervicales y a la posibili-
Las hemorragias externas masivas deben dad de broncoaspiración.
controlarse con presión manual directa sobre

242
CAPÍTULO XXI: RUPTURA DEL ESÓFAGO

Las lesiones esofágicas por lo general son de Se prefiere utilizar una cefalosporina de se-
tratamiento quirúrgico temprano. Mientras más gunda o tercera generación. Si existe ya una
se retarde su manejo, peor será el pronóstico; infección demostrable, o en casos de heridas
en casos bien seleccionados puede brindar- atendidas tardíamente, se toman los cultivos
se un tratamiento no quirúrgico y expectante. intraoperatorios respectivos y se administra el
antibiótico de acuerdo con la sensibilidad del
Clasificación de las lesiones esofágicas: germen.

1. Intramurales: limitadas a lesiones de la El esófago cervical se aborda a través de una


mucosa y desgarros de la muscular, con incisión lateral izquierda por delante del mús-
disección de aire a la pared esofágica y en culo esternocleidomastoideo. En algunos ca-
algunas ocasiones con aire mediastinal sos se puede prolongar la incisión hacia el lado
pero sin colecciones, ni evidencia de esca- contrario o hacia el esternón.
pe de material de contraste. Estos casos
deben ser tratados médicamente y solo si No existe consenso con respecto al cierre del
hay deterioro se necesita tratamiento qui- esófago en uno o dos planos. De cualquier
rúrgico. forma, se debe utilizar un material sintético
2. Transmurales: absorbible (Vicryl 3-0, 4-0 ó Dexon 3-0, 4-0)
a. Ruptura reciente, menor de 12 horas, en puntos separados. Si se utilizan dos pla-
sin infección mediastinal. Su tratamien- nos se debe realizar una primera capa muco-
to consiste en cierre primario de la lesión mucosa y una capa externa muscular.
por toracotomía con refuerzo con
parches o sin él. Los nudos deben quedar en la parte externa
b. Ruptura con infección localizada al sitio del órgano con el objeto de lograr un cierre más
de la perforación. Su tratamiento consis- hermético y evitar que el mismo nudo actúe
te en cierre primario de la lesión con re- como “conductor” para el paso de saliva y ma-
fuerzo con colgajo de músculo intercos- terial extraño a los espacios periesofágicos.
tal o de epiplón y drenaje transtorácico
para canalizar filtraciones transitorias. Las causas de fistulización postoperatoria son
c. Ruptura con mediastinitis difusa o em- el desbridamiento inadecuado de los bordes,
piema extenso. En estos casos la alter- la desvascularización de la pared provocada
nativa es una esofagectomía con esofa- por proyectiles de arma de fuego, el cierre qui-
gostomía cervical y cierre distal. rúrgico bajo tensión y la contaminación masi-
va del campo operatorio.
Aparte de la administración de líquidos y la es-
tabilización hemodinámica del paciente, se de- A las lesiones del esófago torácico puede lle-
be administrar terapia antibiótica inmediata. garse por toracotomía izquierda o derecha. La
del lado derecho ofrece buen campo en heri-
La flora del esófago es multibacterial y está das del tercio medio pero tiene la desventaja
compuesta tanto por aerobios gram positivos de requerir laparotomía adicional cuando es
(esta-filococo y estreptococo), como por gram necesario el ascenso gástrico en casos de
negativos (E. coli, Enterococo y Klebsiella). resección extensa del esófago.
Los gérmenes anaerobios, aunque en menor
cantidad, se encuentran casi siempre en las La toracotomía izquierda, aunque requiere
lesiones infectadas del esófago. experiencia en el manejo de estructuras

243
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

vasculares como el arco aórtico, brinda exce- ción enteral mediante sonda nasogástrica em-
lente visualización de toda la longitud esofá- plazada desde el intraoperatorio. En los ca-
gica y adicionalmente, la posibilidad de com- sos en que se realice esofagectomía en el mis-
pletar el procedimiento intraabdominal a tra- mo acto operatorio se practican gastrostomía
vés del diafragma. descompresiva y yeyunostomía para alimenta-
ción, la cual se inicia tan pronto como sea po-
Las suturas deben reforzarse con parches pe- sible, particularmente en pacientes de alto
diculados de tejido vascularizado. Estos pue- riesgo y en quienes se sospeche un postope-
den fabricarse a partir de pericardio: pleura, ratorio complicado o prolongado.
músculos interostales y, mejor aún, de epiplón
mayor.
TRATAMIENTO: PRINCIPIOS
En las lesiones de la unión cardioesofágica la
sutura puede protegerse con la pared gástrica Hidratación .
en forma similar a una operación de Nissen Antibióticos.
(parche de Thal). Abordaje temprano.
Desbridamiento.
En pacientes con lesión tardía del esófago Cierre cuidadoso.
puede recurrirse al método de Urschel de ex- Extirpación de cuerpos extraños.
clusión esofágica, que consiste en esofagosto- Refuerzo de la sutura con tejido viable: Perito-
mía cervical y la oclusión del esófago en la neo, músculo, pleura, estómago o diafragma.
unión esófago-gástrica.

Este último método, aunque puede estar indi- CERVICAL


cado en unos pocos pacientes, no tiene mu-
chos seguidores hoy en día, pues se piensa • Pequeña perforación sin contaminación.
que la mejor oportunidad es la resección del Desbridamiento, cierre y drenaje.
tejido necrótico y el ascenso del estómago al • Perforación con contaminación. Fase tem-
tórax. prana.
• Perforación con contaminación. Fase tardía.
En casos de lesión a nivel del cardias una al-
ternativa es el abordaje abdominal.
TORÁCICO
En cualquier caso de contaminación medias-
tinal se debe practicar drenaje amplio de la • Fase temprana cierre directo y refuerzo.
zona, incidiendo la pleura desde el estrecho • Fase tardía.
torácico hasta el diafragma y colocando dos a. Esofagogastrectomía.
tubos de tórax de gran calibre, uno anterior y b. Cierre distal del esófago y esofagos-
otro posterior. Antes de su retiro, entre los 4 y tomía proximal.
los 7 días, debe obtenerse un esofagograma
para determinar la integridad del órgano.
PRONÓSTICO
Otro componente importante es el soporte nu-
tricional, sea enteral o parenteral. Si el intesti- Tratamiento temprano: mortalidad de 10-25%.
no se encuentra intacto se debe iniciar nutri- Tratamiento tardío: 25-60%.

244
CAPÍTULO XXI: RUPTURA DEL ESÓFAGO

RESUMEN LECTURAS RECOMENDADAS

CLASIFICACIÓN 1. American College of Surgeons. ATLS, Programa


1. Cerrado. Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi-
2. Penetrante. cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole-
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3. Cuerpo extraño.
2. Asensio J, Gómez H, Falabella A et al. Trauma de
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Esofagoscopia. mediastinal gunshot wounds: are “stable” patients
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245
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXII

Trauma abdominal

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Oficina de Recursos Educacionales de FEPAFEM
Profesor Honorario de Cirugía, Universidad Nacional de Colombia
Jefe Honorario de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá

L a incidencia del trauma abdominal se ha


visto aumentada en las últimas décadas
como consecuencia de los accidentes vehicu-
abreviada y empaquetamiento abdominal com-
binado resucitación fisiológica, con control de
las lesiones viscerales en una segunda opera-
lares y de la violencia que azota a nuestro país ción diferida (Johnson et al 2001; Moore 1996;
y a otras zonas del orbe. La incidencia de lesio- Ordóñez 2002; Rotondo & Zonies 1997).
nes de los órganos sólidos y de las vísceras
huecas del abdomen constituye un porcentaje En la evaluación de un paciente con trauma
significativo de la mortalidad y la morbilidad por abdominal se deben considerar las regiones
accidentes y actos de terrorismo y violencia. anatómicas, por cuanto cada una de ellas ex-
hibe características propias que se traducen
El manejo del trauma abdominal ha cambia- en diferencias en cuanto al riesgo de lesión
do en forma importante desde los años 1990, de los órganos y vísceras que contienen.
principalmente por el advenimiento de nuevos
métodos diagnósticos y de conductas no ope- El abdomen se divide en tres compartimien-
ratorias. El manejo no operatorio de lesiones tos o regiones anatómicas principales:
del bazo y del hígado es de creciente favoritis-
mo y se ha convertido en el estándar univer- 1. La cavidad peritoneal, la cual se subdivide
salmente aceptado. El trauma multisistémico en:
sigue siendo una contraindicación relativa pa- a) abdomen superior, que es la región
ra este tipo de manejo, por la posibilidad de ubicada por debajo del diafragma y la
lesiones ocultas o desapercibidas. Sin embar- reja costal, donde se ubican el hígado,
go, estudios recientes demuestran buenos re- el estómago, el bazo, el diafragma y el
sultados con el manejo no operatorio de lesio- colon transverso.
nes de más de un órgano sólido intraabdomi- b) abdomen inferior, donde se ubican el
nal, y también en pacientes de edad avanza- intestino delgado y el resto del colon
da (Sartorelli et al 2000). intraabdominal.
2. El espacio retroperitoneal, donde están
En el curso del último decenio se ha consolida- ubicados la aorta, la vena cava inferior, el
do el concepto del “control de daño”, el proce- páncreas, los riñones y sus uréteres, el
dimiento que se emplea en pacientes que se duodeno y algunas porciones del colon.
encuentran en condiciones de desangramiento, 3. La pelvis, donde se albergan el recto, la
con el cuadro de hipotermia, acidosis y coagu- vejiga, la próstata, los órganos genitales
lopatía (la “tríada de la muerte”): laparotomía femeninos y los vasos ilíacos.

246
CAPÍTULO XXII: TRAUMA ABDOMINAL

El trauma abdominal puede ser abierto (o pe- Las heridas sobre el abdomen inferior que
netrante) o trauma cerrado. afectan la aorta, la vena cava inferior y los
vasos ilíacos son causa de hemorragia grave.
El trauma penetrante es causado general-
mente por armas blancas, por armas de fue- Las lesiones de la pelvis afectan el recto, el
go o por esquirlas de granadas o bombas ex- intestino delgado, el colon, la vejiga, los uré-
plosivas. Su diagnóstico es obvio o relativa- teres, y los órganos genitales internos feme-
mente fácil. ninos y masculinos.

Toda herida penetrante del abdomen debe ha- Comúnmente se encuentran heridas y lesio-
cer sospechar perforación de víscera hueca y nes combinadas de las diferentes regiones del
debe ser manejada como tal. Las complicacio- abdomen, por lo cual D.D. Trunkey ha plantea-
nes de las heridas penetrantes, especialmen- do que el torso debe ser considerado como
te la infección, se relacionan tanto con el tipo una unidad, como un cilindro con una capa
de arma causante como con el órgano afecta- muscular externa que protege los órganos y
do. Los órganos sólidos, como el hígado y el vísceras en su interior (Tovar & Toro 1997).
bazo, dan lugar a serias hemorragias, en tanto
que las heridas de las vísceras huecas dan lu-
gar a la extravasación de su contenido a la EL TRAUMA CERRADO
cavidad peritoneal y consecuente peritonitis.
Los accidentes de automóvil, bicicletas y moto-
Las heridas penetrantes del tórax por debajo cicletas son causa frecuente de trauma ce-
del 4° espacio intercostal, así como el trauma rrado. En nuestro medio, desafortunadamen-
cerrado sobre la porción inferior de la reja cos- te son también frecuentes las caídas de obre-
tal, deben ser manejadas como trauma abdo- ros de la construcción de edificios.
minal, por cuanto se refieren al compartimiento
superior del abdomen, donde se hallan ubica- El trauma cerrado del abdomen puede pasar
dos el hígado, el estómago, el diafragma y el desapercibido, especialmente cuando el pa-
bazo, que son las estructuras más comúnmen- ciente ha sufrido otro traumatismo severo, por
te afectadas. ejemplo en las extremidades o en el cráneo.
Fracturas del páncreas, un órgano profundo
Las fracturas de la 9a, 10ª y 11ª costillas iz- ubicado en el espacio retroperitoneal, y las le-
quierdas frecuentemente se asocian con trau- siones del duodeno, también ubicado en el es-
ma cerrado del bazo. Igual ocurre en el lado pacio retroperitoneal, tienden a permanecer
derecho, donde las fracturas costales frecuen- ocultas, aun en los pacientes en quienes se
temente se asocian con lesiones del hígado. realiza un lavado peritoneal, lo cual puede
La incidencia de lesiones esplénicas y hepá- tener resultados fatales.
ticas en casos de fracturas costales oscila al-
rededor del 11%. (Shweiki et al 2001). La lesión de los órganos y vísceras del abdo-
men resulta del impacto directo y de las fuer-
Un porcentaje significante de las lesiones gra- zas compresivas, y la magnitud de estas fuer-
ves cerradas del bazo y del hígado sangran zas está en relación directa con la masa de
en forma masiva y pueden llevar rápidamen- los objetos involucrados, su aceleración y
te al shock hipovolémico y a la muerte por des- desaceleración y su dirección relativa en el
angramiento. momento del impacto (Tovar & Toro 1997). En

247
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

los accidentes automovilísticos, el trauma ce- b) Examen físico sistémico general, con
rrado se produce también por efecto del cin- detalles de la inspección para determinar
turón de seguridad. la presencia de abrasiones y heridas por
esquirlas, hematomas y contusiones, pal-
El trauma cerrado es frecuente como resulta- pación, percusión y auscultación del ab-
do de explosiones. Los órganos y vísceras que domen. La palpación abdominal es la ma-
contiene gas son particularmente propensos niobra más informativa en casos de trau-
a ser afectados: pulmón e intestino. ma abdominal; la ausencia de ruidos
peristálticos puede indicar inflamación
peritoneal (peritonitis). El examen físico es
EVALUACIÓN Y MANEJO INICIAL difícil en el paciente que ha sufrido trau-
ma cerrado, y sus resultados suelen ser
Como lo afirma el Manual ATLS del American equívocos, especialmente en aquellos pa-
College of Surgeons (ACS 1997), “la meta del cientes con alteración del sensorio, bien
médico es rápidamente determinar si existe una sea por trauma craneoencefálico o por al-
lesión abdominal y si ésta es o no la causa de la cohol o el consumo de alucinantes; por
hipotensión. En pacientes hemodinámicamente ello, el médico debe esforzarse por reali-
estables sin signos de peritonitis, se puede rea- zarlo con máximo cuidado y atención. Es
lizar una evaluación más prolongada con el fin importante el examen del cuello y de la
de determinar si está presente una lesión espe- espalda para investigar lesiones de la co-
cífica (trauma cerrado) o bien se desarrollan sig- lumna. La exploración digital de una heri-
nos de peritonitis o de sangrado durante el pe- da penetrante constituye un valioso
ríodo de observación (trauma penetrante)”. método diagnóstico en heridas por arma
blanca.
La evaluación inicial tiene como objeto inme- c) Examen rectal, a fin de determinar si hay
diato: sangrado indicativo de perforación intesti-
a) Determinar el estado de la vía aérea y nal, para establecer el tono del esfínter en
mantener su permeabilidad total. casos de trauma raquimedular y de palpar
b) Establecer si hay dificultad de la ventila- la próstata, la cual puede estar “flotante”
ción y proceder a solucionarla. en pacientes que han sufrido ruptura de la
c) Controlar la hemorragia y restablecer el uretra posterior.
volumen circulatorio para lograr estabilidad d) Examen vaginal, que puede revelar san-
hemodinámica. grado por fracturas de la pelvis, y que es
de particular valor en mujeres embaraza-
La evaluación clínica incluye: das con trauma abdominal o pélvico.
a) Una meticulosa historia clínica, la cual e) Intubación nasogástrica, procedimiento
debe ser obtenida mediante el interrogato- que tiene el doble propósito diagnóstico y
rio al paciente mismo o a partir del relato terapéutico. La apariencia y el examen del
del personal que lo atendió en primera ins- aspirado gástrico aportan información va-
tancia o que lo transportó, o de familiares liosa, y la descompresión del estómago es
y testigos. La historia debe incluir un infor- conveniente para reducir el volumen gás-
me sobre el mecanismo del trauma, el cua- trico y prevenir la aspiración traqueobron-
dro inicial, la respuesta a las medidas de quial. En casos de fracturas faciales graves
atención primaria y la evolución cronológica o cuando se sospecha fractura de la base
de los signos y síntomas. del cráneo, la sonda debe ser pasada por

248
CAPÍTULO XXII: TRAUMA ABDOMINAL

la boca para evitar su paso al cerebro a trauma, por cuanto permite identificar le-
través de la lámina cribiforme. siones específicas de los diferentes ór-
f) Cateterismo vesical, procedimiento que ganos, de la región retroperitoneal (es-
permite establecer si hay hematuria y de- pecialmente del páncreas y los riñones),
terminar la respuesta a la administración la presencia de sangre y líquido y de frac-
de líquidos intravenosos durante el proce- turas. La TAC helicoidal, cuya realización
so de reanimación, así como medir la diu- toma apenas unos minutos, aporta infor-
resis horaria como valioso signo del esta- mación mucho más precisa que otros
do de la volemia y la perfusión renal. Pero métodos que estuvieron muy en boga,
antes de realizar el cateterismo vesical se como el lavado peritoneal, pero solo se
debe practicar el examen rectal y vaginal a encuentra disponible en los centros ur-
fin de excluir lesiones de la uretra que pue- banos. Es el examen por excelencia para
dan contraindicar el paso de una sonda. la definición del manejo no operatorio.
g) Exámenes de laboratorio, que deben in- 6) La ultrasonografía (US) o ecografía del
cluir hematocrito/hemoglobina, recuento de abdomen y la pelvis, en forma similar a
leucocitos con fórmula diferencial, amilase- la TAC, constituye un método no inva-
mia, glicemia, creatinina sérica; uroanálisis; sor que permite identificar lesiones es-
prueba de embarazo en mujeres en edad pecíficas, particularmente del hígado y
fértil (si no dan historia de ligadura de trom- el bazo, y la presencia de hemorragia y
pas); niveles de alcohol y/o drogas; gases derrames en la cavidad peritoneal. Su
sanguíneos. Además, se deben ordenar precisión y rendimiento diagnóstico tra-
pruebas para transfusión, y ordenar san- dicionalmente se han considerado infe-
gre en reserva. riores a los de la TAC o del lavado
h) Estudios imagenológicos, los cuales de- peritoneal, y el procedimiento es muy
ben ser solicitados en forma racional, según operador-dependiente.
el tipo de trauma y las condiciones indivi- Pero hoy se reconoce que la US en pa-
duales de cada paciente. En casos de trau- cientes seleccionados con trauma ce-
ma mayor, éstos generalmente incluyen: rrado puede ser el único método diag-
1) Radiografía de la columna cervical. nóstico necesario en casos de trauma
2) Radiografía simple de tórax. hepático o esplénico en quienes se de-
3) Radiografía de pelvis. muestra ausencia o una mínima canti-
4) La radiografía simple de abdomen, aun- dad de líquido (sangre). El Focused
que de valor muy limitado en el trauma Abdminal Sonogram for Trauma
abdominal, puede revelar la presencia examination (Rozycki & Shackford 1996)
de neumoperitoneo indicativo de perfo- es de fácil ejecución, portátil y de alta
ración de una víscera hueca, así como fidelidad para la detección de hemope-
el borramiento de las líneas del psoas ritoneo en el paciente inestable o como
que se asocia con lesiones retroperito- tamizaje en el paciente estable que re-
neales y fracturas óseas; se debe soli- quiere mayor información sobre lesio-
citar sólo en casos seleccionados. nes específicas en los órganos median-
5) La tomografía axial computadorizada te TAC (Ochsner et al 2000).
(TAC) del abdomen y de la pelvis, con El principal valor de la US reside en ser
medio de contraste tanto oral como de carácter no invasor y en que se pue-
intravenoso, constituye hoy el examen de de realizar al lado de la cama del pa-
mayor importancia en la evaluación del ciente.

249
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

i) El lavado peritoneal es un método de alto con trauma, ni las indicaciones ni la certe-


valor diagnóstico en el trauma cerrado, con za diagnóstica aparecen todavía claras
un índice de sensibilidad del 98% para san- (Barba y col 1997).
grado peritoneal. Vino a llenar el vacío que
dejan el examen físico y la radiografía sim-
ple de abdomen. El lavado peritoneal es LAPAROTOMÍA O MANEJO
un verdadero estándar de manejo en las NO OPERATORIO
salas de urgencias de los hospitales de ni-
vel intermedio, especialmente en lugares La evaluación general y especial del paciente
donde ni la TAC ni el ultrasonido se encuen- con trauma abdominal está orientada, una vez
tran disponibles. Su única contraindicación completada la reanimación, a determinar la
es la indicación para cirugía. necesidad de realizar laparotomía.
La técnica para su realización aparece en
una de las Guías de esta serie. MANEJO NO OPERATORIO
El lavado peritoneal se considera positivo
cuando la aspiración en el momento de in- El manejo no quirúrgico de lesiones de los
sertar la cánula produce 10 mL o más de órganos sólidos del abdomen, específicamen-
sangre, cuando el conteo de hematíes en te del hígado y el bazo, en pacientes hemodi-
el efluente es >100.000/mm 3, cuando el námicamente estables y que pueden ser es-
conteo de leucocitos en el efluente es >500/ tudiados por TAC es el método estándar y lo-
mm3 o cuando se detectan bilis, bacterias gra altas tasas de éxito (Miller et al 2002); mu-
o contenido alimenticio. chos consideran que la inestabilidad hemodi-
Sus indicaciones son: námica es la única contraindicación (Sartorelli
• hallazgos equívocos en el examen ab- et al 2000).
dominal;
• examen físico limitado y no confiable por Los criterios para manejo no operatorio inclu-
el estado neurológico del paciente (trau- yen:
ma craneoencefálico, cervical, paraple- • restauración de la estabilidad hemodiná-
jia, intoxicación coma); mica con mínima resucitación con líquidos
• necesidad de estudios imagenológicos parenterales;
prolongados tales como angiografía; • no hay lesión craneoencefálica;
• necesidad de anestesia para tratar le- • edad <55 años (pero este criterio no es
siones extraabdominales; absoluto, y se informan buenos resultados
• hipotensión o anemia de causa no es- en pacientes mayores);
tablecida. • ausencia de lesiones intraabdominales o
j) La laparoscopia diagnóstica y terapéuti- extraabdominales significantes.
ca es un procedimiento de aplicación se-
lectiva en el manejo de pacientes seleccio- En los pacientes bajo tratamiento no opera-
nados con trauma abdominal. Su utilidad torio se debe realizar una TAC de control a
máxima reside en la identificación de lesio- las 24 horas.
nes diafragmáticas en casos de trauma pe-
netrante toracoabdominal, así como en ca- LAPAROTOMÍA POR TRAUMA
sos de heridas tangenciales de la pared ab-
dominal. Aunque muchos autores preconi- La laparotomía por trauma se realiza en con-
zan el uso de la laparoscopia en pacientes diciones fisiológicas en ocasiones críticas y

250
CAPÍTULO XXII: TRAUMA ABDOMINAL

cuando ya existe daño de órganos y vísce- 1. Aire libre, presencia de aire en retrope-
ras. Tiene dos propósitos principales: ritoneo o ruptura del diafragma en trau-
ma cerrado.
• el control del daño, que incluye el control 2. Cuando después de trauma cerrado o
de la hemorragia, la identificación de las penetrante la TAC con medio de con-
lesiones y el control de la contaminación; traste demuestra ruptura del tracto gas-
en pacientes moribundos ésta es la única trointestinal, lesión de vejiga intraabdo-
etapa que puede realizarse. minal, lesión del pedículo renal o bien
• la reparación y reconstrucción de los órga- lesión severa de parénquima visceral.
nos afectados.
La mayoría de las heridas por arma de fuego
Criterios para realizar laparotomía: requieren laparotomía inmediata. Ocasional-
mente se observan heridas tangenciales que
No se justifica realizar laparotomía en todos afectan la pared abdominal que no ingresan
los casos de heridas por arma blanca. Median- a la cavidad peritoneal. En estos casos se
te estricta observación y evaluación periódi- debe identificar el tracto subcutáneo del paso
ca, se encuentra que en alrededor de la ter- del proyectil, tracto que es doloroso a la pal-
cera parte de estos pacientes se puede evitar pación, y comprobar la situación mediante
la laparotomía. exámenes apropiados.

El Manual del ATLS del American College of La laparotomía debe estar precedida de la
Surgeons define las siguientes indicaciones administración de antibióticos profilácticos. Se
para laparotomía en adultos: recomienda la combinación de clindamicina-
amikacina o de cefoxitina como agente único.
A. Indicaciones Basadas en la Evaluación Como en todo caso de trauma, se debe con-
Abdominal. siderar la inmunización antitetánica.
1. Trauma cerrado de abdomen con lava-
do peritoneal o ultrasonido positivo. La incisión de la laparotomía de trauma debe
2. Trauma cerrado de abdomen con ser amplia para lograr una buena exploración
hipotensión recurrente a pesar de una de los cuatro cuadrantes del abdomen. Se reco-
adecuada resucitación. mienda la incisión vertical sobre la línea alba,
3. Datos tempranos de peritonitis. la cual se puede extender hacia abajo según
4. Hipotensión con herida abdominal pe- necesidad. La primera prioridad al ingresar a
netrante. la cavidad peritoneal es controlar el sangrado,
5. Sangrado de estómago, recto o tracto identificando tan pronto como sea posible una
genitourinario debido a trauma pene- posible herida vascular. En ocasiones es ne-
trante. cesario recurrir al empaquetamiento hemostá-
6. Heridas por arma de fuego que invo- sico, para reoperación en 24-72 horas según
lucran la cavidad peritoneal o estructu- el tipo de herida y el órgano afectado.
ras retroperitoneales vasculares o
viscerales. En los casos de trauma cerrado es necesario
7. Evisceración. explorar el páncreas y el duodeno.

B. Indicaciones Basadas en los Estudios Los hematomas retroperitoneales de la pelvis


Radiológicos en los pacientes con fracturas pélvicas no

251
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

deben ser abiertos, por el peligro de hemo- LAPAROTOMÍA PARA CONTROL DE DAÑO
rragia incontrolable. Pero los hematomas re-
troperitoneales, especialmente los asociados CA Ordóñez (2002) describe e ilustra en de-
con la vena cava inferior o con el riñón, sí talle el procedimiento secuencial para control
deben ser abiertos, drenados y controlados. de daños, el cual ha logrado reducir la morta-
lidad en el trauma mayor, y se refiere a la tríada
productora de la muerte:

MUERTE

Figura 1. “Triada de la muerte”

Las tres causas más comunes de muerte en


trauma son el trauma craneoencefálico, la
exanguinación y la deficiencia metabólica. Son
las dos últimas las que causan muerte en los
pacientes manejados con el método de con-
trol de daños. Según Ordóñez (2002), la mor-
talidad en las series informadas en la literatu-
ra sobre control de daños oscila entre 46% y
66%, tasas muy altas que corresponden a la
condición desesperada en que se encuentran
estos pacientes. “Definitivamente el éxito de
lograr la hemostasia durante la cirugía inicial
es claramente la clave determinante de un
buen resultado, pues la reoperación se aso-
cia con una tasa de recuperación más baja.”
(Ordóñez 2002).

Clásicamente el control de daño se divide en


tres etapas (Johnson et al 2001):

Figura 2. Cirugía de control de daños

252
CAPÍTULO XXII: TRAUMA ABDOMINAL

CA Ordóñez (2002) describe así el enfoque la sala de urgencias tienen influencia benéfi-
sistemático en tres etapas para el control de ca sobre el pronóstico en estos pacientes se-
daños en el trauma abdominal, cuya finalidad veramente traumatizados.
es impedir el desarrollo de la cascada mortal
que culmina con la muerte por desangramien- Escribe Ordóñez (2002): “Se ha logrado un
to: triunfo en la cirugía del trauma con la técnica
del control de daños en los traumas devasta-
dores al final del milenio y es requerido más
Etapa I: Quirófano juicio quirúrgico para decidir con prontitud la
• Control de la hemorragia aplicación del control de daños antes que se
• Control de la contaminación presente la tríada de la muerte, hipotermia,
• Empaquetamiento intra- coagulopatía y acidosis”.
abdominal
• Cierre temporal
LECTURAS RECOMENDADAS
1. American College of Surgeons. ATLS, Programa
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi-
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gio Americano de Cirujanos. Chicago, 1997.
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• Recalentamiento central. sio, DV Feliciano, F Holguín. Sociedad Panameri-
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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

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254
CAPÍTULO XXIII: TRAUMA CARDÍACO

CAPÍTULO XXIII

Trauma cardiaco

Carlos H. Morales Uribe, MD


María Isabel Villegas Lanau, MD
Francisco Gómez Perineau, MD
Departamento de Cirugía
Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia
Hospital Universitario San Vicente de Paúl, Medellín

INTRODUCCIÓN

E l trauma del tórax es responsable directo


de aproximadamente 25% de todas las
muertes por trauma que ocurren en el mundo
rida del corazón, y aunque no presente sínto-
mas ni signos de inestabilidad hemodinámica
se deben realizar todos los esfuerzos, con los
y en no menos de otro 25% es factor asociado recursos disponibles, para descartarla.
que contribuye a la muerte de los pacientes
politraumatizados. Aproximadamente 10% de La región precordial, para el efecto llamada zo-
los pacientes con trauma del tórax presentan na de riesgo, está delimitada arriba por el bor-
lesiones del corazón. La mortalidad asociada de superior de las clavículas, abajo por el re-
con las heridas del corazón es muy alta. La borde costal inferior -incluido el epigastrio- y a
mayoría de los pacientes con este tipo de trau- los lados por las dos líneas medio claviculares.
ma mueren en el sitio del accidente, durante
el transporte hacia el hospital o al llegar a él, Sin embargo, las heridas en otras regiones
antes de que puedan ser intervenidos quirúrgi- del cuerpo, particularmente las causadas por
camente. La mortalidad antes de la atención proyectiles que afectan el dorso, el abdomen
definitiva oscila entre 60% y 97%. . o el cuello, así como aquellas cuya trayecto-
ria permita pensar que cruzaron el mediastino,
Duque y colaboradores describen una serie también tienen alta probabilidad de haber le-
de 1.022 pacientes llevados a cirugía por trau- sionado el corazón. De hecho, más de 50%
ma cardiaco penetrante en un periodo de 52 de las heridas del corazón por arma de fuego
meses en el Hospital Universitario San Vicente no penetran por la región precordial y deben
de Paúl de Medellín. sospecharse, por consiguiente, en todo pa-
ciente con gran inestabilidad hemodinámica
o en estado de shock, cuya causa no esté bien
CUADRO CLÍNICO definida.

En todo paciente que ingrese a la sala de ur- Los pacientes con heridas de corazón presen-
gencias con una herida en la región precordial tan un amplio espectro clínico, desde el que
o en el epigastrio se debe sospechar una he- ingresa en paro cardiaco y sin signos vitales,

255
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

hasta el que llega por sus propios medios, Categoría 4: lesiones toracoabdominales, in-
estable y sin síntomas. El estado de shock cluye pacientes con heridas en la topografía
severo y el taponamiento cardiaco constitu- toracoabdominal, generalmente por arma de
yen formas intermedias, pero muy frecuentes, fuego, en quienes el diagnóstico de lesión car-
entre estas dos situaciones extremas. diaca es enmascarado por las lesiones abdo-
minales.
Saadia et al han propuesto la siguiente clasi-
ficación de las lesiones cardiacas penetran- Categoría 5: presentación benigna, pacien-
tes con base en la presentación clínica al in- tes con lesiones precordiales, estables hemo-
greso a la unidad de atención: dinámicamente, sin síntomas ni signos de
hemorragia o taponamiento cardiaco.
Categoría 1: sin señales de vida, incluye pa-
cientes con heridas torácicas penetrantes, in- Una clasificación de esta naturaleza permite
conscientes y sin signos de vida (sin pulso, referirse al tema con un lenguaje común. Sin
sin tensión arterial y sin movimientos respira- embargo, cada una de estas categorías tiene
torios). aspectos que suscitan controversia. Tabla 1.

Categoría 2: críticamente inestables, incluye Una presentación frecuente de las heridas car-
pacientes con heridas penetrantes torácicas, diacas es el shock hipovolémico secundario
hipotensión severa y paro cardiaco inminen- a hemorragia masiva. Este ocurre cuando la
te. El cuadro clínico resulta de sangrado ma- herida del pericardio no se obstruye con coá-
sivo de origen cardiaco o de taponamiento gulos, y es lo suficientemente grande para de-
cardiaco severo. jar escapar toda la sangre proveniente de la
herida del corazón, que se acumula en el es-
Categoría 3: taponamiento cardiaco, incluye pacio pericárdico. El drenaje de esta sangre
pacientes con herida precordial y signos típi- desde el saco pericárdico puede ocurrir al
cos de paro cardiaco (hipotensión, ruidos car- exterior o al espacio pleural; en el primer caso,
diacos alejados y presión venosa central ele- el paciente ingresa exangüe e hipotenso, pero
vada). con ruidos cardiacos audibles y se ausculta

TABLA 1. CLASIFICACIÓN Y MANEJO DEL TRAUMA CARDIACO PENETRANTE

Categoría Controversia Recomendaciones


Sin signos de vida ¿A quién resucitar? Resucitar cuando el paro
cardiorrespiratorio es presenciado.
Críticamente inestable ¿Pericardiocentesis?¿Dónde operar? No se recomienda. En quirófanos.
Taponamiento cardiaco ¿Cuáles ayudas diagnósticas? Ninguna; a lo sumo una radiografía
de tórax.
Lesión toracoabdominal ¿Cómo hacer el diagnóstico? Ventana pericárdica transdiafrag-
mática.
Presentación benigna ¿Cómo diagnosticar?¿A quién tratar? Ventana pericárdica.A todos los pa-
cientes con lesión cardiaca.
Adaptada de: Saadia R, Levy RD, Degiannis E, Velmahos GC. Penetrating cardiac injuries: clinical classification and management strategy. Br J Surg 1994;
81:1572-1575.

256
CAPÍTULO XXIII: TRAUMA CARDÍACO

bien el murmullo vesicular en ambos hemitó- Muchos pacientes ingresan con la tríada clá-
rax. Cuando el drenaje se hace al espacio sica de Beck, y en ellos está indicada la
pleural, hay compromiso circulatorio y respira- intervención inmediata. Una proporción signi-
torio, el paciente ingresa con el cuadro clínico ficante llega al hospital sin signos de tapona-
de un hemotórax masivo, con dificultad respi- miento o de hemorragia profusa, pero con heri-
ratoria, hipotensión, ruidos cardiacos audibles, das en la región precordial o heridas de trayec-
taquicardia, hipo ventilación y matidez en el toria incierta por proyectiles de arma de fuego.
hemitórax afectado y al colocar un tubo de En ellos siempre se debe sospechar la posibi-
toracostomía se obtienen más de 1.000 mL lidad de una herida cardiaca y, en consecuen-
de sangre. cia, agotar todos los recursos disponibles para
descartarla.
El pericardio es una membrana gruesa y fi-
brosa que no se distiende con facilidad. Pe-
queños orificios traumáticos pueden sellarse AYUDAS DIAGNÓSTICAS
rápidamente con coágulos o grasa del medias-
tino, impidiendo la salida de la sangre prove- El estudio con ultrasonido y la exploración
niente de la herida cardiaca que se va acumu- directa del pericardio a través de una venta-
lando, con cada sístole, en este saco rígido. na son los métodos más sensibles y específi-
cos para diagnosticar una herida oculta del
Una de las primeras manifestaciones del ta- corazón. La radiografía de tórax y la tomo-
ponamiento cardiaco es la elevación de la pre- grafía axial computadorizada (TAC) carecen
sión venosa central. Hay disminución del vo- de valor diagnóstico específico, pero son im-
lumen latido del ventrículo derecho y, por con- portantes para analizar la localización y la tra-
siguiente, del volumen de llenado del ventrí- yectoria de un proyectil, particularmente cuan-
culo izquierdo (precarga) y de la fracción de do se sospechan heridas que atraviesan el
eyección. mediastino.

La sospecha de taponamiento cardiaco exige La punción directa del pericardio (pericar-


confirmación inmediata, pero mientras se con- diocentesis) ha sido abandonada como me-
firma el diagnóstico, o mientras el paciente es dio diagnóstico por su escasa sensibilidad y
llevado al quirófano, se actúa para mejorar las por el riesgo de lesionar el corazón. Jugó un
condiciones hemodinámicas administrando papel importante como método terapéutico y
líquidos de reposición, a pesar de las presio- diagnóstico.
nes venosas centrales elevadas. Esto se co-
noce como el manejo paradójico del tapona- En las salas de emergencia debe estar dispo-
miento. Se ha dicho que “el corazón no puede nible un ecógrafo bidimensional para ser
bombear, porque no se puede llenar” (Elefte- utilizado por los médicos de planta y los ciru-
riades et al 1989). Y no se puede llenar porque janos. Su sensibilidad es de 100%, la especi-
no existe gradiente de presión entre las cavas ficidad de 96,9% y la tasa de precisión de
y la aurícula derecha que permita el llenado. 97,3% (Rozycki et al 1999).
Administrar líquidos endovenosos es una me-
dida destinada a crear tal gradiente y, como El ecocardiograma tiene la ventaja de detec-
consecuencia, a mejorar el trabajo de ambos tar, además de la presencia de sangre en el
ventrículos. pericardio y el sitio de herida en las paredes
del corazón, la presencia de lesiones asocia-

257
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

das de las válvulas y los tabiques cardiacos. o dos puntos de seda gruesa para ejercer li-
También detecta hipomotilidad segmentaría gera tracción hacia abajo. Se abre entonces
que sugiere isquemia por trauma asociado de el pericardio en una longitud de aproximada-
las arterias coronarias. mente 1 cm. La salida de sangre confirma el
diagnóstico de herida cardiaca, evidencia que
La exploración quirúrgica del pericardio por indica la necesidad de prolongar la incisión
vía subxifoidea se ha popularizado como para corregir la herida a través de esternoto-
método diagnóstico y hoy es el procedimien- mía o de toracotomía anterolateral.
to de elección, el patrón oro, para confirmar o
descartar una herida oculta del corazón. Al- Cirujanos del Hospital Universitario San Vicen-
gunos autores consideran que se puede eje- te de Paúl de Medellín (Morales et al. 1997)
cutar con anestesia local para evitar los ries- han propuesto una alternativa para la venta-
gos de colapso hemodinámico asociados con na subxifoidea, la ventana video-asistida por
la inducción anestésica en el paciente con ta- toracoscopia, cuyos resultados son muy
ponamiento cardiaco. alentadores. La gran utilidad de este método
es que permite diagnosticar lesiones torácicas
Se realiza una incisión de ocho centímetros asociadas, lesiones del diafragma y evacuar
sobre la línea alba, que comienza en el apén- hemotórax retenido, por lo cual se recomien-
dice xifoides y se lleva a través de la aponeuro- da su aplicación en presencia de lesiones torá-
sis muscular para descubrir el tejido graso pre- cicas con hemotórax o neumotórax. En el Cua-
peritoneal, que se preserva y se diseca para dro 1 se presenta el flujograma para descar-
llegar al espacio retroesternal. Se sujeta fuer- tar heridas cardiacas en pacientes con lesio-
temente el pericardio con dos pinzas de Allis nes de presentación benigna.

CUADRO1.
FLUJOGRAMA DE ACTIVIDADES EN PACIENTES CON HERIDAS PRECORDIALES DE PRESENTACIÓN BENIGNA

HERIDAS PREECORDILAES DE PRESENTACIÓN BENIGNA

ULTRASONIDO

+ EQUIVOCO -

CIRUGÍA ECOCARDIOGRAFÍA OBSERVACIÓN


VENTANA PERICÁRDICA

ANORMAL NORMAL

TORACOSCOPIA LAPAROSCOPIA

258
CAPÍTULO XXIII: TRAUMA CARDÍACO

TRATAMIENTO PREHOSPITALARIO aorta descendente en los pacientes con heri-


das vasculares abdominales masivas y sutu-
Los pacientes que presenten algún signo de rar la del corazón. Su realización en el paciente
vida como pulso, presión arterial o ritmo car- traumatizado es controvertida. Un metanálisis
diaco organizado, en el sitio donde ocurrió el reciente reporta tasa de supervivencia global
accidente o trauma, deben ser trasladados a de apenas 11% en los pacientes sometidos a
un centro de urgencias. este procedimiento; sin embargo, tiene su ma-
yor utilidad, cuando se utiliza en la atención
Se pueden mejorar las tasas de superviven- del paciente con una herida cardiaca. Existe
cia si la toracotomía se realiza en la fase de acuerdo en que los pacientes que son recogi-
atención prehospitalaria por personal capaci- dos en el sitio del trauma sin signos vitales no
tado (Cotas et al. 2001). Si el paro cardiaco deben ser sometidos a toracotomía de resuci-
sucede 10 minutos antes del ingreso a la uni- tación, pues en ellos no hay precedentes de
dad de trauma, la posibilidad de sobrevivir es supervivencia.
excepcional. Aunque la toracotomía de resu-
citación es recomendada por algunos, cuan- Intervención inmediata: además de los pa-
do el paro cardiorrespiratorio ha ocurrido en cientes en que estaría indicada una toracoto-
el sitio del trauma, el procedimiento es gene- mía de resucitación, aquellos con heridas pre-
ralmente considerado como una medida de cordiales e inestabilidad hemodinámica (hipo-
altos costos y escaso beneficio. tensión, sudoración, frialdad, excitación psico-
motora o estupor), con signos claros de tapo-
La recomendación para la fase prehospitalaria namiento cardiaco, o con una muy alta sos-
es reanimar los pacientes que presenten al- pecha de herida cardiaca, son llevados de in-
gún signo de vida con líquidos intravenosos y mediato al quirófano.
oxígeno; si es necesario, se realiza masaje
cardiaco e intubación endotraqueal y el pa- Intervención diferida: está indicada única-
ciente debe ser trasladado de inmediato a una mente en aquellos pacientes cuya estabilidad
unidad hospitalaria. hemodinámica permita tomar el tiempo nece-
sario para confirmar o descartar la presencia
de una herida de corazón, con taponamiento
TRATAMIENTO HOSPITALARIO o sin él. Si no se dispone de un estudio ecocar-
diográfico o si después de haberlo realizado
Toracotomía de emergencia: es una toraco- persiste la duda, deben ser llevados al quiró-
tomía anterolateral que se realiza en la sala fano, para ser sometidos bajo anestesia ge-
de atención inicial de urgencias en pacientes neral, a una ventana pericárdica, cuyo resul-
que ingresan en estado agónico, en shock tado indicará la conducta a seguir.
severo y que no responden a la terapia con
líquidos o que perdieron sus signos vitales
(respiración espontánea, pulso, presión arte- VÍAS DE ABORDAJE
rial, ruidos cardiacos, reflejo pupilar) en los
últimos minutos durante el transporte hacia el La toracotomía anterolateral o submamaria
hospital. Su propósito es controlar una hemo- izquierda ha sido la vía preferida para las in-
rragia masiva dentro del tórax, practicar ma- tervenciones de emergencia en pacientes muy
saje directo del corazón en los casos de paro inestables. Es un acceso fácil y rápido al hemi-
cardiaco, pinzar el hilio pulmonar, pinzar la tórax izquierdo, al corazón y a los grandes

259
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

vasos. Permite controlar lesiones del hilio pul- nofilamento o, en las de mayor tamaño, me-
monar y pinzar la aorta torácica descendente diante el paso de una sonda de Foley a tra-
como maniobra de resucitación. Tiene limita- vés del orificio traumático. Los puntos deben
ciones para exponer las estructuras del lado ser colocados en U, protegidos con parches
derecho del corazón. Sin embargo, puede pro- de dacrón y preparados con pericardio del mis-
longarse, a través del esternón, hacia el hemi- mo paciente, que se montan en el momento
tórax derecho, con lo cual se obtiene una ex- de la sutura. Las aurículas permiten la colo-
posición muy amplia de todo el mediastino cación de clamps laterales que controlan la
anterior. hemorragia mientras se realiza la sutura.

La esternotomía media es otra vía de acce- Recientemente se ha reportado el uso de ade-


so rápido, fácil y segura al mediastino ante- nosina que produce bradicardia extrema o
rior. Provee una exposición excelente y única asistolia de breves segundos de duración,
de todo el contenido del saco pericárdico, co- suficientes para permitir la sutura.
razón, grandes vasos, aurícula izquierda y
venas pulmonares, cayado de la aorta y tron- Las heridas localizadas en la proximidad de
co braquiocefálico. Su limitación fundamental las arterias coronarias son relativamente fre-
es la escasa o nula exposición que ofrece para cuentes. La técnica de pasar puntos en U por
heridas asociadas de los dos hemitórax y del debajo del vaso y anudarlos al lado es la más
mediastino posterior. utilizada.

CONTROL DE LA HEMORRAGIA Y SUTURAS LESIONES CARDIACAS COMPLEJAS

Las estructuras cardiacas afectadas en orden Se definen como aquellas que comprometen
de frecuencia son: adicionalmente, tejidos y estructuras distintos
a la pared muscular de las aurículas o
• Ventrículo derecho 40-50%. ventrículos.
• Ventrículo izquierdo 30-40%.
• Aurícula derecha 10-15%. Las lesiones proximales de los troncos corona-
• Aurícula izquierda 3-7%. rios principales, de los tabiques interauricular
• Arterias coronarias 2-5%. e interventricular y de las válvulas cardiacas,
son las más comunes. En principio, deben re-
Las heridas pueden presentarse de dos mane- pararse utilizando técnicas de circulación ex-
ras: como heridas simples, únicas, pequeñas, tracorpórea; sin embargo, la necesidad de ins-
de bordes definidos y de fácil acceso o como talar un circuito de circulación extracorpórea
heridas complejas, de gran tamaño, múltiples, de manera urgente en el quirófano de trauma
de acceso difícil o con compromiso evidente es excepcional.
de las arterias coronarias. Las lesiones valvu-
lares o septales subyacentes rara vez son En unos pocos casos, la magnitud del miocar-
percibidas durante el acto operatorio. dio comprometido por la ligadura inevitable de
una rama coronaria, puede precipitar una fa-
LESIONES CARDIACAS SIMPLES lla ventricular aguda.

Las heridas simples casi siempre pueden re- Ante la dificultad existente para emprender
pararse con puntos separados de sutura mo- una revascularización coronaria de emergen-

260
CAPÍTULO XXIII: TRAUMA CARDÍACO

cia con circulación extracorpórea, se puede Los exámenes más utilizados son: radiogra-
recurrir al uso del balón intraórtico de contra- fía de tórax, electrocardiograma, enzimas
pulsación, de la misma manera que se trata- cardiacas, ecocardiograma y gamagrafía.
ría un infarto no traumático en evolución.
La radiografía de tórax no revela datos espe-
La gran mayoría de las lesiones intracavitarias cíficos acerca de una lesión cerrada del cora-
(valvulares, septales) pasan casi siempre des- zón; sin embargo, puede aportar datos muy
apercibidas durante el acto operatorio inicial. valiosos que incrementen la sospecha y re-
La aparición de un soplo, la dilatación de las velen la magnitud del traumatismo. Fracturas
cavidades cardiacas o una falla cardiaca per- costales múltiples, fracturas del esternón, co-
sistente después de la reparación de la heri- lecciones aéreas o líquidas en la pleura, en-
da externa, son algunos de los signos que sanchamiento de la silueta mediastinal o car-
deben alertar al cirujano acerca de la posible diaca y presencia de aire en el pericardio son
presencia de lesiones subyacentes. signos de valor al correlacionarlos con el es-
tado clínico del paciente o con trastornos de
la actividad eléctrica.
TRAUMA CERRADO DEL CORAZÓN
Los trastornos electrocardiográficos, fun-
Las cifras reportadas en la literatura sobre la damentalmente del ritmo y de la conducción,
incidencia del trauma cardiaco cerrado varían son frecuentes en el trauma contuso del co-
entre 8% y 71% en los pacientes que sufren razón. Aunque también carecen de especifi-
un trauma cerrado de tórax. cidad y no aportan datos en cuanto a la gra-
vedad del trauma, hoy existe un cierto consen-
El trauma cardiaco cerrado, es menos frecuen- so acerca de su importancia en el diagnóstico
te que el abierto o penetrante en los centros inicial del trauma cardiaco cerrado: se consi-
de trauma de los países latinoamericanos. Se dera que el paciente con trauma cerrado del
considera que este tipo de trauma tiene rela- tórax, asintomático y con un electrocardiogra-
ción directa con los accidentes automovilísti- ma normal, no necesita más estudios y pue-
cos que ocurren a grandes velocidades en las de ser dado de alta en razón a que la posibili-
autopistas de los países desarrollados, don- dad de que presente posteriormente compli-
de constituyen 80-90% de las admisiones por caciones cardiacas es menor de 0,1%. Por
trauma cerrado del corazón. otra parte, el paciente con trastornos eléctricos
del ritmo, aunque su condición clínica sea
En la actualidad no es fácil confirmar un diag- estable, debe permanecer en observación y
nóstico de trauma cardiaco cerrado ni esta- seguimiento continuo, por lo menos durante
blecer con precisión su gravedad, debido a la 24 horas.
sensibilidad y especificidad inconstantes de
las distintas pruebas. Además, con gran fre- Las enzimas tienen una utilidad discutible en
cuencia los pacientes con trauma cerrado el contexto del trauma cerrado del corazón.
cardiaco ingresan al hospital con otras lesio- La creatinfosfoquinasa (CPK y su fracción MB)
nes severas, craneoencefálicas, fracturas puede conservarse dentro de límites norma-
mayores, traumas del tórax y del abdomen les o elevarse en muy escasa medida en trau-
que, inicialmente, predominan en el proceso mas leves o moderados del ventrículo dere-
diagnóstico y en la necesidad de atención cho, debido a su pared delgada y escasa masa
rápida. muscular. Pero puede elevarse en forma muy

261
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

significativa como consecuencia de otros trau- ratorio, se encontraron 59 (9%) con criterios
matismos musculares esqueléticos que, con electrocardiográficos de infarto agudo, 11
mucha frecuencia, coexisten con el trauma (1,7%) con lesiones del tabique interventricular
cerrado del tórax. y 8 (1,2%) con lesiones asociadas de las vál-
vulas del corazón diagnosticadas por ecocar-
La troponina 1 parece ser más específica para diograma.
confirmar o descartar trauma cerrado del co-
razón. La elevación enzimática casi siempre
coincide con trastornos eléctricos previos, lo PRONÓSTICO
que las hace innecesarias.
La mayoría de los pacientes (55-82%) con
Los estudios con radioisótopos (talio, tec- herida cardiaca fallecen antes de recibir aten-
necio) aportan poca información adicional a ción médica y los que llegan con signos vita-
la que puede obtenerse por otros medios más les a un centro de urgencias tienen una tasa
disponibles y menos costosos. de mortalidad que varía entre 8,5% y 85%. La
mayoría de la muertes (55%) sucede por fuera
El ecocardiograma es un examen de mucha de los hospitales, y los informes más recientes
utilidad para detectar lesiones del corazón en apenas muestran una discreta disminución.
el paciente inestable con trauma cerrado del
tórax. También es importante conocer el es- El pronóstico depende de factores como la na-
tado de la función cardiaca en aquellos pacien- turaleza del soporte prehospitalario, el estado
tes que van a ser sometidos a una o más inter- clínico del paciente al ingresar a urgencias, el
venciones quirúrgicas como consecuencia de agente causal, las lesiones asociadas, el nú-
trauma múltiple. mero de heridas cardiacas y su localización.
Presentan mayor riesgo de morir los pacientes
con lesión por arma de fuego, los que ingresan
TRATAMIENTO INTERDISCIPLINARIO en shock, los que presentan lesión de dos o
más cámaras o dos o más heridas cardiacas
Aunque no exista evidencia de lesión asocia- asociadas y quienes durante el intra operatorio
da del corazón, todo paciente intervenido por presentan shock persistente y arritmia o re-
herida cardiaca debe ser evaluado con crite- quieren maniobras de resucitación; el riesgo
rios clínicos y electrocardiográficos destinados también aumenta en la medida en que ascien-
a detectar posibles secuelas insospechadas de el puntaje de los índices de trauma PI, PTTI
de lesión cardiaca inicial. En un informe publi- y PCTI. El taponamiento cardiaco y las for-
cado por cirujanos del Hospital Universitario mas de presentación benigna tienen pronós-
San Vicente de Paúl de Medellín, de un total tico favorable cuando se comparan con la pre-
de 642 pacientes estudiados en el postope- sentación clínica de shock hipovolémico.

262
CAPÍTULO XXIII: TRAUMA CARDÍACO

CUADRO 2.
FLUJOGRAMA PARA LA ATENCIÓN DEL TRAUMA CARDIACO CERRADO

TRAUMA CERRADO DE TÓRAX

SOSPECHA DE TRAUMA CARDÍACO

ESTABLE INESTABLE
ECOCARDIOGRAFÍA
ECG

ANORMAL NORMAL ANORMAL NORMAL

ARRITMIA
CAMBIOS EN ST
ISQUEMIA

ECOCARDIOGRAFÍA

MONITORIZACIÓN SIN RIESGO MONITORIZACIÓN SIN RIESGO


28-48 HORAS - UCI UCI

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264
CAPÍTULO XXIV: TRAUMA DEL BAZO

CAPÍTULO XXIV

Trauma del bazo

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Oficina de Recursos Educacionales de FEPAFEM
Profesor Honorario de Cirugía, Universidad Nacional de Colombia
Jefe Honorario de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá

E l bazo es el órgano abdominal que exhi-


be la mayor frecuencia de lesiones trau-
máticas. Su ubicación en el hipocondrio iz-
agentes causales más comunes son bacte-
rias encapsuladas como el Streptococcus
pneumoniae (neumococo o diplococo), en
quierdo, bajo las costillas 9, 10 y 11, lo hace más de la mitad de los caos, el Hemophilus
muy vulnerable cuando se produce trauma de influenzae y la Neisseria meningitidis, pero
la reja costal inferior izquierda. también Echerichia coli, estreptococos y esta-
filococos. Su incidencia es mayor en lactantes,
El bazo puede ser lesionado por trauma cerra- en niños y en adultos con compromiso inmu-
do, trauma penetrante o lesión iatrogénica. Es- nitario. Realmente es raro en adultos sanos.
ta última ocurre con mayor frecuencia en ope-
raciones sobre el estómago y el compartimien- Por ello, después de decenios de una conduc-
to abdominal superior. ta quirúrgica errónea que preconizaba la es-
plenectomía obligatoria en toda lesión esplé-
El bazo es un órgano linfo-reticular, el de ma- nica, en las últimas décadas se ha producido
yor tamaño en el sistema linfático, de impor- un cambio sustancial: el riesgo vitalicio de una
tancia en el sistema inmunitario, tanto celular infección fulminante postesplenectomía ha
como humoral, y se le atribuyen numerosas significado el mayor impulso hacia una políti-
funciones, principalmente de fagocitosis y pro- ca de conservación del bazo. Primero se utili-
ducción de factores opsónicos, anticuerpos e zó la esplenorrafia como método de conser-
inmunoglobulinas. La esplenectomía produce vación esplénica, y hoy es el manejo no ope-
profunda depresión inmunitaria y puede resul- ratorio de preferencia en una proporción muy
tar en cuadros de sepsis fulminante, tanto en significativa de las lesiones esplénicas. El ma-
los niños como en los adultos. nejo no operatorio es la rutina en niños, con
una tasa de éxito de 75% a 93%. En los adul-
El dictum de que la esplenectomía era la ope- tos se logra éxito con el método no operatorio
ración más segura en el manejo de las lesio- en más de 50% de los casos (Peitzman et al
nes esplénicas se mantuvo indiscutido hasta 2000). En los adultos, la edad mayor de 55
los años 1960, cuando se documentó el sín- años resulta en menores tasas de éxito y
drome de la infección fulminante postes- mayor mortalidad (Harbrecht et al 2001). Sin
plenectomía, especialmente en niños. Este embargo, en varias series se ha demostrado
síndrome, aunque infrecuente, se asocia con que la edad mayor de 55 años no es un crite-
muy elevada tasa mortalidad, la cual puede rio para no asumir el manejo operatorio de las
exceder el 50% (Burch & Moore 2002). Los lesiones esplénicas (Cocanour et al 2000).

265
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MÉTODOS DIAGNÓSTICOS dimiento ha sido reemplazado por la ultra-


sonogarfía y la TAC, y hoy está limitado a
El examen clínico provee poca información casos muy seleccionados.
decisoria y tiene limitaciones mayores en pa- 6. Lavado peritoneal. En los centros donde
cientes con alteraciones del sensorio; se le no exista la disponibilidad de ultrasonogra-
atribuye una certeza de 65% en el diagnósti- fía o TAC, este sigue siendo el método pri-
co de lesiones intraabdominales en el paciente mario para establecer la presencia de san-
con trauma cerrado (Barba y col 1997). gre en la cavidad peritoneal, con un eleva-
do grado de confiabilidad. Un lavado peri-
1. Radiografía simple de abdomen. Es de- toneal positivo para presencia de sangre
masiado inespecífica y, por consiguiente, (o de contenido intestinal), en tales circuns-
de escasa o ninguna utilidad cuando se tancias, constituye evidencia decisoria para
sospecha lesión esplénica. emprender la laparotomía.
2. Radiografía de tórax. Aunque de por sí 7. Laparoscopia. Es de creciente utilización
no permite establecer el diagnóstico, es en el diagnóstico de pacientes con sospe-
muy útil para determinar fractura de costi- cha de lesión del bazo, la cual produce acu-
llas en el lado izquierdo, burbuja de aire en mulación de sangre en el cuadrante supe-
el tórax compatible con hernia intratorácica, rior izquierdo. Sin embargo, la localización
elevación del diafragma izquierdo o derra- posterior del bazo hace que la evaluación
me pleural. completa de este órgano sea difícil (Barba
3. Ecografía (ultrasonografía). Es un méto- y col 1997).
do no invasor de alta confiabilidad en el
diagnóstico de lesiones del bazo; permite
la demostración de ruptura, así como la pre- TIPOS Y CAUSAS DE LESIONES
sencia de sangre o de otros líquidos en la DEL BAZO
cavidad peritoneal. Es el método que vino
a reemplazar al lavado peritoneal. Los principales tipos son:
4. Tomografía axial computadorizada • Desgarros capsulares.
(TAC). Actualmente es el método por exce- • Laceraciones del parénquima.
lencia para demostrar lesiones intraabdo- • Lesiones de estallido o de maceramiento.
minales y especialmente lesiones del bazo, • Heridas hiliares.
en las cuales logra una certeza del orden • Hematomas subcapsulares.
de 95%. La TAC permite visualizar el tipo y
la magnitud de lesión esplénica, por lo cual Aunque la gran mayoría de las esplenecto-
representa el método óptimo para la gra- mías se realiza por trauma, cerrado o
dación del trauma y para definir la indica- penetrante, del tórax o del abdomen, en el
ción quirúrgica. Su uso está restringido a bazo se presentan lesiones iatrogénicas, que
pacientes hemodinámicamente estables. generalmente ocurren en el curso de operacio-
5. Gamagrafía. El estudio con radionúclidos, nes sobre la porción superior del abdomen,
especialmente con sulfuro colidal-Tc-99m, especialmente gastrectomías.
tuvo amplia utilización en muchos centros;
permite, en pacientes hemodinámicamente La gradación de las lesiones, que aparece
estables, demostrar lesiones tanto esplé- ilustrada según Shackford y Molin es muy si-
nicas como hepáticas, y también hacer el milar a la de la American Association for the
seguimiento de su evolución. Este proce- Surgery of Trauma (AAST 2003):

266
CAPÍTULO XXIV: TRAUMA DEL BAZO

Grado I. Hematoma subcapsular pequeño y • Estabilidad hemodinámica.


no expansivo, o laceración subcapsular menor • Paciente consciente y libre de dolor que
no sangrante. Afecta <10% de la superficie indique irritación peritoneal.
esplénica. • No existen otras lesiones abdominales ni
extraabdominales.
Grado II. Hematoma grande pero no expan- • Edad menor de 55 años, un criterio que es-
sivo (10-50% de la superficie del bazo), o tá prácticamente abandonado. En efecto
laceración <5 cm de diámetro. hoy se manejan pacientes >55 años con
buenos resultados.
Grado III. Laceración capsular de 1-3 cm de • Estabilidad hemodinámica.
profundidad en el parénquima y que no afec- • No hay coagulopatía.
ta un vaso trabecular. Hematoma subcapsular, • La TAC revela lesión parenquimatosa me-
>50% de la superficie o expansivo; hemato- nor y hemoperitoneo menor o moderado.
ma subcapsular roto o parenquimatoso. He-
matoma intraparenquimatosa expansivo. Es La contraindicación de edad >55 años ha sido
ya una lesión significativa. revisada, y hoy se sabe que entre 30% y 70%
de los adultos pueden ser manejados con el
Grado IV. Lesión >3 cm muy grave consistente método no operatorio con una tasa de éxito
en un gran hematoma intraparenquimatoso de más de 85-90%%, incluyendo pacientes
roto o una laceración a través de arterias po- >55 años (Cocanour et al 2000; Myers et al
lares trabeculares que producen isquemia por 2000; Nix et al 2001).
desvascularización de un segmento del órga-
no (>25% del bazo). La cuantificación del hemoperitoneo por
ultrasonografía y/o TAC es importante en la
Grado V. La forma más severa de lesión, ca- evaluación del paciente y en la toma de deci-
racterizada por la casi total maceración del pa- siones sobre tratamiento no operatorio o lapa-
renquima o una isquemia casi total por lace- rotomía. El hemoperitoneo se puede clasificar
ración vascular del hilio y avulsión de la arteria de la siguiente manera (Peitzman et al 2000):
esplénica principal o de sus ramas primarias.
• Hemoperitoneo menor: sangre en la región
periesplénica o en la bolsa de Morrison.
MANEJO NO OPERATORIO • Hemoperitoneo moderado: presencia de
sangre en una o en ambas goteras pericó-
En los tiempos actuales el manejo no operato- licas.
rio de las lesiones esplénicas constituye la mo- • Hemoperitoneo mayor: hallazgo adicional
dalidad terapéutica de preferencia, pero siem- de sangre en la pelvis.
pre bajo indicaciones precisas. Aunque esto
es generalmente válido en el caso de los ni- La tasa de éxito del tratamiento no operatorio
ños, es motivo de controversia cuando se tra- es inversamente proporcional a la magnitud
ta de adultos, caso en el cual muchos médi- del hemoperitoneo: cuatro quintas partes de
cos optan por el tratamiento quirúrgico. los pacientes con hemoperitoneo menor, la mi-
tad de aquellos con hemoperitoneo modera-
La siguientes son las indicaciones para tra- do y apenas algo menos de la tercera parte
tamiento conservador no operatorio: de los casos de hemoperitoneo mayor resul-
tan exitosos.

267
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las lesiones grado I y II generalmente presen- miento que permita la conservación del
tan hemoperitoneo menor, en tanto que la ma- órgano.
yoría de las lesiones tipo IV y V presentan
hemoperitoneo mayor. En cuanto a la laparotomía, la buena exposi-
ción que permita ejecutar con facilidad las ma-
Pero al emprender el manejo no operatorio, niobras de movilización, con división de los
debe siempre tenerse en cuenta que los ries- vasos cortos, es la clave del éxito en el trata-
gos de las transfusiones y de la observación miento operatorio de una lesión del bazo.
pueden sobrepasar los del potencial salva-
mento del bazo. La decisión de no operar im- La incisión de línea media con la posibilidad
plica un cuidadoso y meditado juicio. Por otra de extensión inferior es una buena vía de abor-
parte, también es necesario tener en cuenta daje que facilita el tratamiento de otras lesio-
que la laparotomía no terapéutica implica con- nes asociadas. Sin embargo, la incisión trans-
siderable morbilidad, especialmente en el pa- versa izquierda ofrece un excelente abordaje
ciente de edad avanzada. para la esplenectomía o la esplenorrafia. La
escogencia entre estos dos tipos de abordaje
se toma, fundamentalmente, con base en los
CONSIDERACIONES QUIRÚRGICAS hallazgos en la TAC.

Desde un comienzo se debe distinguir entre: Las indicaciones para esplenectomía son:

a) la decisión de laparotomía, y • Lesión grave del bazo con hemoperitoneo


b) la decisión de esplenectomía. mayor.
• Paciente con coagulopatía o con riesgo de
La laparotomía está indicada en casi todos los desarrollar coagulopatía (shock y/o hemo-
pacientes con trauma penetrante del abdomen rragia severos).
y en un gran número de aquellos con trauma • Trauma múltiple severo.
cerrado que presentan heridas graves del ba- • Paciente hemodinámicamente inestable,
zo con hemoperitoneo mayor u otras lesiones por cuanto se toman unos 30 minutos para
abdominales, según hallazgos clínicos, la la- hacer esplenorrafia, a menos que se trate
paroscopia, la ultrasonografía o la TAC. de una lesión menor.
• Imposibilidad para lograr hemostasia con
La decisión sobre si se debe efectuar espleno- la esplenorrafia, lo cual indica laceración
rrafia o esplenectomía se hace mejor en el del hilio.
curso de una laparotomía y depende de: • Pacientes mayores de 55 años con lesio-
nes severas en el bazo y hemoperitoneo
• la edad y condición general y hemodiná- mayor.
mica del paciente, factores que determi- • Lesión hiliar significativa.
nan su capacidad para resistir un procedi-
miento prolongado; La esplenectomía generalmente está indica-
• el tipo y magnitud de la lesión. da en casos en los cuales existan otras fuen-
tes de hemorragia u otras lesiones graves y
En los niños y adultos jóvenes, por su mayor potencialmente fatales, tales como trauma
propensión a desarrollar sepsis fulminante, se craneoencefálico, fracturas pélvicas o ruptu-
debe intentar la esplenorrafia u otro procedi- ra de la aorta torácica.

268
CAPÍTULO XXIV: TRAUMA DEL BAZO

En los casos en que la esplenectomía resulta En el período postoperatorio el paciente esple-


obligatoria, es aconsejable el autotrasplante nectomizado exhibe trombocitosis, con re-
de segmentos de bazo, aunque éste es un cuentos plaquetarios de más de 400.000/mL,
método controvertido que no ha probado defi- que usualmente se mantienen elevados por
nitivamente su valor. varias semanas. La trombocitosis parece es-
tar asociada con una mayor incidencia de com-
En general no se deben dejar drenes luego plicaciones tromboembólicas.
de una esplenectomía, a menos que se sos-
peche lesión de la cola del páncreas. Luego Las alternativas a la esplenectomía son:
de una esplenorrafia es recomendable colo-
car drenaje de succión cerrada, a fin de moni- • Aplicación tópica de sustancias hemostá-
torizar el sangrado postoperatorio. sicas.
• Pegamento de fibrina.
Todo paciente sometido a esplenectomía debe • Sutura de puntos sangrantes.
recibir la vacuna antineumocóccica polivalente • Esplenorrafia (sutura del parénquima).
(Pneumovax®). • Resección parcial del bazo.
• Ligadura de ramas de la arteria esplénica
En los pacientes esplenectomizados no se en el hilio.
prescriben antibióticos profilácticos a largo tér- • Mallas hemostáticas.
mino, pero sí cursos cortos con motivo de ex- • Arteriografía y embolización arterial (un
tracciones dentales o de otros procedimientos. método de eficacia aún no totalmente com-
probada).
En el período postoperatorio el paciente esple- • Observación y manejo no operatorio.
nectomizado exhibe trombocitosis, con re-
cuentos plaquetarios de más de 400.000/ml, La esplenorrafia con salvamento del bazo es
que usualmente se mantienen elevados por un procedimiento seguro y se asocia con una
varias semanas. La trombocitosis parece estar mínima incidencia de resangrado, alrededor
asociada con una mayor incidencia de com- de 1%.
plicaciones tromboembólicas (Pimpl et al
1989).
LECTURAS RECOMENDADAS
Existe consenso sobre la aplicación de la va-
cuna antineumocóccica polivalente (Pneumo- 1. AAST. American Association for the Surgery of
vax®) en todo paciente que haya sido someti- Trauma. Web page. http//www.aast.org/injury/t5-
do a esplenectomía; algunos prefieren admi- 8.htm#spleen.
2. Barba CA, Schwab CW, Vicencio-Tovar A, Birolini
nistrarla en el momento del egreso del pacien-
D. Trauma de bazo. En: Trauma. Editado por A
te, por razón del estado de inmunodepresión Rodríguez y R. Ferrada. Editores asociados: J
asociado con el trauma, el cual teóricamente Asensio, DV Feliciano, F Holguín. Sociedad Pa-
puede disminuir su efectividad. namericana de Trauma. Impresora Feriva SA.
Colombia, 1997.
Generalmente no se prescriben antibióticos 3. Burch JM, Moore EE. Injuries to the liver, biliary
profilácticos a largo término, pero sí cursos tract, spleen, and diaphragm. En: ACS Surgery.
cortos con motivo de extracciones dentales o Principles and Practice. Editado por DW Wilmore.
American College of Surgeons. WebMD Corpora-
de otros procedimientos (Hollcroft & Blaisdell
tion. New York, 2002.
1989).

269
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

4. Cocanour CS, Moore FA, Ware DN, et al. Age achieve a high rate of nonoperative success in
should not be a consideration for nonoperative patients of all ages. J Trauma 2000; 48:801-805.
management of blunt splenic injury. J Trauma 8. Nix JA, Costanza M, Daley BJ, et al Outcome of
2000; 48:606-610. the current management of splenic injuries. J Trau-
5. García F, Arango L, Angel A. Trauma esplénico. ma 2001; 50:835-842.
Estudio retrospectivo en 9 años (1982-1990). Rev 9. Patiño JF. Trauma del bazo. En: Lecciones de Ci-
Colomb Cirugía 1994; 9:33-37. rugía. Por JF Patiño. Editorial Médica Panameri-
6. Harbrecht BG, Peitzman AB, Rivera L, et al. cana. Buenos Aires-Bogotá, 2001.
Contribution of age to outcome of blunt splenic 10. Peitzman AB, Heil B, Rivera L, et al. Blunt splenic
injuries in adults: multicenter study of the Eastern injury in adults: multi-institutional study of the
Association for the Surgery of Trauma. J Trauma Eastern Association for the Surgery of Trauma. J
2001; 51:887-895. Trauma 2000; 49:177-189.
7. Myers JG, Dent DL, Stewart RM, et al. Blunt 11. Shackford SR, Molin M. Management of splenic
splenic injuries: dedicated trauma surgeons can injuries. Surg Clin North Am 1990; 70:595.

270
CAPÍTULO XXV: TRAUMA DEL COLON Y RECTO

CAPÍTULO XXV

Trauma de colon y recto

Eduardo Londoño Schimmer, MD FACS


Jefe, Sección de Cirugía General y Servicio de Cirugía de Colon y Recto
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

E n nuestro medio (Botero et al), cerca de


30% de los heridos por trauma penetran-
te que se atienden en un servicio de trauma
te ante la confirmación de penetración a tra-
vés de la aponeurosis abdominal.

tienen herida de colon. En el paciente con trauma abdominal cerrado,


con examen abdominal equívoco o bien no eva-
Las heridas de colon y recto son producidas luable por trauma craneoencefálico concomi-
por: tante, la evaluación usualmente es mucho más
1. Trauma penetrante bien sea por proyectiles difícil y requiere de ayudas diagnósticas tales
de arma de fuego (de carga única, de baja como la ecografía, la tomografía axial computa-
velocidad 300-450 m/s; de alta velocidad: rizada (TAC) y el lavado peritoneal diagnóstico
600-980 m/s) o por arma corto-punzante o (LPD), que permiten evaluar la presencia de
corto-contundente. líquido intraabdominal, y en algunos casos per-
2. Trauma cerrado. miten sospechar la presencia de lesión a nivel
3. Elementos utilizados en prácticas sexuales. del mesenterio intestinal o del colon, y muy oca-
4. Por ingestión de cuerpos extraños (palillos, sionalmente permiten sospechar ruptura de vís-
espinas de pescado, huesos de pollo). cera hueca por extravasación del medio de con-
5. Iatrogenia durante procedimientos quirúr- traste, o por la presencia de bacterias o resi-
gicos complejos como puede suceder en duos vegetales en el efluente obtenido luego
pacientes con carcinomatosis peritoneal, de la instilación de líquido durante el LPD.
enteritis postirradiación, peritonitis u obs-
trucción intestinal, o bien durante procedi- Las heridas de recto son poco frecuentes pero,
mientos diagnósticos invasivos como la co- a diferencia de las lesiones de colon poseen
lonoscopia o la toma de biopsias por colo- una alta morbi-mortalidad. La mortalidad para
noscopia. las heridas de recto secundarias a trauma ce-
rrado es hasta de 50% debido principalmente
a las heridas asociadas. Ochenta por ciento
DIAGNÓSTICO de las lesiones de recto se deben a heridas
por proyectil de arma de fuego y solamente
Se debe sospechar herida de colon y recto en 10% son secundarias a trauma cerrado. Las
cualquier paciente que haya sufrido una herida lesiones secundarias a arma cortopunzante y
por proyectil de arma de fuego penetrante al a empalamiento representan aproximadamen-
abdomen, o por herida con arma cortopunzan- te un 3-10%.

271
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La evaluación secundaria del paciente trau- tratamiento se lleva a cabo antes de las
matizado (ATLS), exige que se practique una primeras 12 horas la morbi-mortalidad es
tacto rectal a todo paciente traumatizado lo similar.
que permite identificar el tono del esfínter, la • Contaminación fecal: es la variable más di-
presencia de sangre o de cuerpos extraños. fícil de evaluar. Existe contradicción al res-
En el paciente con fractura de pelvis (aún más pecto. Algunos estudios con nivel de evi-
si la fractura es abierta) se debe realizar una dencia II y III han demostrado que a mayor
rectoscopia rígida para descartar perforación contaminación fecal mayor incidencia de
del recto. La radiografía simple de pelvis per- morbilidad y mortalidad.
mite identificar fracturas asociadas y la pre- • Heridas asociadas y severidad del trauma:
sencia de cuerpos extraños. la presencia de múltiples lesiones asocia-
das era considerado una contraindicación
para la reparación primaria de las heridas
FACTORES DE RIESGO QUE de colon. Sin embargo varios estudios con
nivel de evidencia I, a pesar de que de-
PREVÉN COMPLICACIONES EN EL muestran que a mayor número de heridas
MANEJO DEL TRAUMA DE COLON asociadas hay mayor morbi-mortalidad no
consideran este factor como una contrain-
Además de la severidad del trauma de colon, dicación para el manejo primario de las he-
existen otra serie de factores que influyen en ridas de colon. La mayoría de estudios con
la elección y resultados del tratamiento quirúr- nivel de evidencia I, II y III sugieren que
gico. Una serie de factores de riesgo han sido cuando existen más de dos heridas aso-
identificados por diferentes investigadores pa- ciadas las complicaciones sépticas se au-
ra identificar aquellos pacientes que se pueden mentan. Un índice de PATI (Penetrating
beneficiar de un método definitivo de repara- Abdominal Trauma Index) por encima de
ción para diferenciarlos de los pacientes con 25 y una escala de ISS (Injury Severity
alto riesgo de complicaciones postoperatorias, Score) mayor de 25, así como un grado de
principalmente dehiscencia anastomótica y Flint mayor de 11 están asociados a un
abscesos intrabdominales. La mayoría de es- aumento significativo en la incidencia de
tos estudios poseen un nivel de evidencia II o complicaciones.
III. Cinco estudios con nivel de evidencia I en- • Transfusión sanguínea: el número de uni-
contraron una incidencia similar o menor de dades de sangre trasfundidas es un factor
complicaciones infecciosas luego de repara- de riesgo independiente asociado a la mor-
ción primaria comparada con el uso de colos- bilidad postoperatoria. Se ha mencionado
tomía. como número crítico de unidades, cuando
se trasfunden más de cuatro unidades.
• Shock: varios estudios han demostrado que • Localización anatómica de la lesión: no
la hipotensión transitoria pre o intraoperato- existe diferencia.
ria no afecta los resultados ni la incidencia
de complicaciones postoperatorias. Sin
embargo si el paciente mantiene una hipo- TRATAMIENTO
tensión sostenida en el pre o trans-operato-
rio la mortalidad aumenta significativamente. Como en cualquier paciente traumatizado las
• Tiempo entre la injuria y el control operato- prioridades de manejo están dadas por el ABC
rio: las investigaciones sugieren que si el de la reanimación, la evaluación primaria y

272
CAPÍTULO XXV: TRAUMA DEL COLON Y RECTO

luego la secundaria. Si es necesario, luego las lesiones no-destructivas del colon está indi-
se deben realizar los métodos diagnósticos cado en la mayoría de lesiones penetrantes
que se consideren necesarios. Cualquier heri- del colon.
da penetrante ubicada entre los pezones y la
ingle puede cursar con herida de colon, pero
no todas requieren de exploración quirúrgica. RESECCIÓN Y ANASTOMOSIS
Tan pronto se tome la decisión de intervenir
PRIMARIA EN EL MANEJO DE LAS
al paciente se deben iniciar antibióticos de am- LESIONES DESTRUCTIVAS DEL COLON
plio espectro contra aerobios y anaerobios
(p.ej. metronidazol-aminoglucósido, clindami- Existen en la literatura estudios con nivel de
cina-aminoglucósido). Los antibióticos deben evidencia I, II y III en los que se incluyen más
continuarse como medida terapéutica de de mil pacientes. El riesgo de dehiscencia es
acuerdo a los hallazgos de la laparotomía. La de 1-6,6%. En el estudio multicéntrico pros-
intervención debe practicarse por laparotomía pectivo no aleatorizado de Demetriades et al
mediana, lo que permite establecer la grave- (2001), en el que participaron los grupos de
dad de la lesión, el grado de contaminación, la Universidad del Valle y el Hospital El Tunal,
las heridas asociadas y su tratamiento. la mortalidad relacionada con la lesión del co-
lon fue de 1,3% (4 pacientes) todos ellos en
el grupo de pacientes con derivación, y la in-
CIERRE PRIMARIO cidencia de complicaciones fue similar para
los dos grupos estudiados (primario vs colos-
Existen múltiples estudios con nivel de evidencia tomía). Concluyen los autores que el método
I, II y III que han demostrado que la sutura prima- quirúrgico empleado en el manejo de la le-
ria es el método de elección actual en el manejo sión del colon no afecta la incidencia de com-
de las lesiones de colon no-destructivas (lesión plicaciones abdominales, y no tiene rela-
< del 50% de la circunferencia). Las heridas ción con los factores de riesgo asociados.
deben desbridarse cuando tienen los bordes
necróticos. El cierre de la herida puede hacerse La contaminación fecal severa, un puntaje en
en un solo plano, sin tensión, empleando puntos la escala PATI >25, la necesidad de trasfundir
separados con material absorbible o no-ab- más de cuatro unidades de sangre en las pri-
sorbible a largo plazo. La reparación en dos pla- meras 24 horas y el uso de un agente antibió-
nos no ha demostrado ninguna diferencia. tico único como profiláctico, son los factores
de riesgo independientes relacionados con el
Múltiples estudios (Nivel de evidencia I, II, III) desarrollo de complicaciones abdominales.
han demostrado que la incidencia de fístula
postoperatoria es alrededor de 1,1%, inciden- En algunos servicios estos factores de ries-
cia que es menor que la reportada en cirugía go, junto con la presencia de más de dos ór-
electiva. Los diversos estudios concluyen que ganos intrabdominales lesionados (en espe-
el evitar una colostomía disminuye la morbili- cial si existe trauma vascular o de páncreas),
dad, la incapacidad que produce la colostomía consideran que se debe practicar colostomía.
entre el momento en que se construye y su Sin embargo, el estudio de análisis multivaria-
cierre, y la morbilidad del cierre de la colosto- do de estos factores de riesgo, no ha podido
mía (4,9-26.3%). Estos estudios permiten con- demostrar una diferencia significativa con
cluir que el cierre primario para el manejo de relación al tipo de manejo empleado.

273
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRAUMA DE RECTO También debe practicarse una colostomía deri-


vativa cuando existen grandes laceraciones
Los principios de manejo del trauma rectal asociadas a pérdida de sustancia importante
evolucionaron con base en las experiencias de la pared rectal o cuando el mecanismo
obtenidas en diversos conflictos bélicos. Estos esfinteriano se encuentra comprometido por
principios incluyen la derivación del contenido la lesión.
fecal, el desbridamiento, el cierre de la lesión
de ser posible, el lavado del recto distal, la A pesar de que los estudios de Lavenson y
colocación de dren presacro y la administra- Cohen, derivados de la experiencia en el ma-
ción de antibióticos de amplio espectro. Con nejo de lesiones de recto durante la Guerra
estos principios se logró una disminución sus- de Vietnam (1971) demostraron una reducción
tancial en la mortalidad, pero aún la morbilidad de la morbilidad de 72% a 10% y de la morta-
es elevada. lidad de 22% a 0%, mediante el lavado del
muñón rectal distal, la experiencia con el ma-
Es importante aclarar que el recto posee una nejo de estas lesiones causadas por heridas
porción intraperitoneal y una extraperitoneal, por proyectil de arma de fuego de baja veloci-
y que por lo tanto el manejo varía de acuerdo dad en la vida civil, no ha demostrado ningún
con la localización anatómica. Se considera beneficio con este método (Burch 1989); sin
hoy en día, con base en los estudios de repa- embargo, si la lesión se debe a proyectiles de
ración primaria de las heridas de colon, ya alta velocidad varios autores consideran que
enunciados, que el manejo de la lesión de rec- el lavado distal debe efectuarse. Lo mismo su-
to intraperitoneal (cara anterior y laterales de cede con el uso del dren presacro. En un es-
los 2/3 superiores), en la mayoría de casos tudio prospectivo aleatorizado, Gonzalez et al,
consiste en el reparo primario. no encontraron ninguna reducción en la inci-
dencia de complicaciones infecciosas cuan-
Las lesiones extraperitoneales (cara posterior do se utilizaba el lavado rectal distal y el dren
de los 2/3 superiores) del recto pueden repa- presacro. El uso de dren presacro para algu-
rarse en forma primaria si la disección que de- nos autores debe reservarse únicamente para
be hacerse es mínima, o bien si es necesario aquellos pacientes con una lesión extraperito-
exponer el recto para reparar otras lesiones neal del recto que no ha sido explorada.
asociadas, como heridas vesicales o cuando
se deben exponer los vasos iliacos para su La Asociación Americana para la Cirugía del
reparación. Si lo anterior no es necesario, las Trauma desarrolló un Sistema de Escala para
heridas de recto extraperitoneal (tercio distal) Trauma de Recto (Rectal Injury Scaling Sys-
no se tocan y se debe practicar una derivación tem) mediante la cual se establece una esca-
de la materia fecal mediante el uso de una la de 1- 5 según la severidad de la lesión.
colostomía derivativa total (colostomía termi-
nal con fístula mucosa o cierre del muñón tipo La lesión grado 1 representa una contusión o
Hartmann). hematoma sin devascularización o una lesión
de espesor parcial de la pared del recto, la
Ciertos autores (Rombeau, 1978) han demos- grado 2 una laceración de espesor completo
trado que una colostomía en asa puede ofre- que compromete menos de 50% de la circun-
cer derivación completa, y en ocasiones al ha- ferencia, la grado 3 una laceración de espe-
cer el asa se debe cerrar el muñón distal para sor completo que compromete más de 50%
que funcione como una colostomía terminal. de la circunferencia, la grado 4 una laceración

274
CAPÍTULO XXV: TRAUMA DEL COLON Y RECTO

de espesor completo con extensión al periné 4. Atweh NA, Vieux EE, Ivatury R, et al. Indications
y la grado 5 lesión en las que existe compro- for barium enema preceding colostomy closure in
miso de la vascularidad de un segmento de trauma patients. J Trauma 1989; 29:1641-1642.
5. Baker LW, Thomson SR, Chadwick SJ: Colon
recto.
wound management and prograde colonic lavage
in large bowel trauma. Br J Surg 1990; 77:872-
De acuerdo con esta clasificación se puede 876.
hacer un manejo racional de la lesión. Las le- 6. Botero M, Ramírez H, Suarez R, et al. Guía de
siones grado 1 y 2 pueden manejarse con o Manejo: Trauma de colon y recto. Hospital San
sin reparo y no se requiere derivación de la Vicente de Paul, Medellín, Colombia.
materia fecal, lavado del muñón rectal o colo- 7. Burch JM, Feliciano DV, Mattox KL. Colostomy and
cación de dren presacro. Para las lesiones drainage for civilian rectal injuries: is that all?. Ann
Surg 1989; 209: 600-611.
grado 3 a 5 el manejo consiste en colostomía
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derivativa, lavado distal y reparación de la of the treatment of the injured colon in the 1980s.
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ducidas por trauma cerrado el manejo debe 10. Chappuis CW, Frey DJ, Dietzen CD, et al.
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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

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CAPÍTULO XXV: TRAUMA DEL COLON Y RECTO

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277
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXVI

Trauma de cuello

Jorge Alberto Ospina Londoño, MD, FACS


Profesor Asociado, Departamento de Cirugía
Universidad Nacional de Colombia
Director Médico, Clínica del Country
Bogotá

P ara orientar el tratamiento del trauma del


cuello, que es causa frecuente de consul-
ta a los servicios de urgencias, deben tener-
está formada por los tres componentes de la
fascia cervical profunda.

se en cuenta dos determinantes fundamenta- Esta organización del cuello en compartimien-


les: el conocimiento de la anatomía regional y tos anatómicos limita el sangrado externo de las
el mecanismo del trauma. lesiones vasculares y disminuye la posibilidad
de exanguinación; sin embargo, tal aparente
efecto benéfico, cuando hay hemorragia en com-
ANATOMÍA partimentos cerrados, puede producir compre-
sión de la vía aérea con graves consecuencias.
El cuello tiene gran cantidad de estructuras
anatómicas, muchas más que cualquier otra El cuello se divide en tres zonas anatómicas.
parte del organismo: digestivas, respiratorias, El conocimiento de las estructuras alojadas
nerviosas, vasculares y endocrinas. Estar fa- en cada una de ellas permite la investigación
miliarizado con su anatomía es el primer paso diagnóstica sistemática de los tres componen-
para orientar el diagnóstico y el tratamiento tes anatómicos fundamentales en el trauma
del trauma sobre la región cervical. cervical:

La primera estructura que se encuentra de- • Sistema vascular (arterias carótidas, sub-
bajo de la piel es la fascia superficial que en- clavias, vertebrales y venas subclavias y
vuelve el músculo platisma. Existe otra fascia, yugulares).
llamada fascia cervical profunda, que se sub- • Sistema respiratorio (laringe y tráquea).
divide en una fascia de revestimiento que en- • Sistema digestivo (faringe y esófago).
vuelve el músculo esternocleidomastoideo,
una fascia pretraqueal que se adhiere a los ZONA I
cartílagos tiroides y cricoides y se mezcla con
el pericardio en la cavidad torácica y una fascia Comprende la región de la salida del tórax.
prevertebral que envuelve los músculos pre- Se extiende desde las fosas claviculares has-
vertebrales y que se une a la fascia axilar que ta el nivel del cartílago cricoides. Allí se en-
aloja los vasos subclavios. La vaina carotídea cuentran los vasos subclavios, los grandes va-

278
CAPÍTULO XXVI: TRAUMA DE CUELLO

sos del tórax, el plexo braquial, las cúpulas promiso menor de los tejidos vecinos y las le-
pleurales y los ápices pulmonares, la tráquea, siones se limitan a los órganos encontrados
el esófago y la porción proximal de las arte- en el trayecto de la herida. En las heridas por
rias carótidas y vertebrales, la porción distal proyectiles, la extensión del daño es mayor y
de las venas yugulares, la desembocadura del afecta no sólo los tejidos encontrados en el
conducto torácico en el lado izquierdo, los ner- trayecto, sino que dependiendo de la veloci-
vios vagos, la glándula tiroides, los nervios la- dad del proyectil, la energía disipada puede
ríngeos recurrentes y segmentos de la colum- llegar a afectar los tejidos vecinos. A este he-
na vertebral y la medula espinal. cho se suma la dificultad para determinar su
trayectoria y poder evaluar el daño causado.

ZONA II
TRAUMA CERRADO
Se extiende desde el cartílago tiroides hasta
el ángulo de la mandíbula. Contiene la larin- Aunque el cuello parece estar protegido por
ge, la parte media y la bifurcación de las caró- la cabeza y el tórax cuando se produce trau-
tidas, las venas yugulares internas, los ner- ma cerrado, es muy susceptible a la flexión,
vios vagos, la glándula tiroides, el esófago y extensión o rotación forzadas que pueden ser
parte de la faringe, un segmento de la colum- suficientes para producir daño en algunas de
na y la médula espinal, los vasos vertebrales sus estructuras: columna vertebral, médula
y los nervios laríngeos recurrentes. espinal, laringe y arterias carótidas.

ZONA III EVALUACIÓN CLÍNICA


Está comprendida entre el ángulo de la man- La evaluación de un paciente con trauma cer-
díbula y la base del cráneo. Contiene los pa- vical sigue los mismos lineamientos del ABC
res craneanos bajos, las carótidas interna y del método ATLS del American College of
externa, los segmentos proximales de la co- Surgeons establecidos para el enfoque inicial
lumna y médula espinal, los vasos vertebra- del paciente traumatizado (Ver Guía para el
les y las glándulas submaxilares. Manejo Inicial del Paciente Traumatizado).

MECANISMOS DE LESIÓN VÍA AÉREA

TRAUMA PENETRANTE Cuando se sospeche trauma del cuello es prio-


ridad establecer una vía aérea permeable y
La mayoría de las lesiones traumáticas del segura. Se deben identificar desde el primer
cuello resultan de trauma penetrante causa- momento los pacientes que tienen compro-
do por arma cortopunzante, heridas cortantes miso establecido de la vía aérea y tener en
o heridas por proyectil de arma de fuego. La cuenta que todo paciente con trauma del cue-
extensión de la lesión es variable y depende llo, independientemente del mecanismo del
del mecanismo del trauma. En las lesiones trauma, debe ser considerado como paciente
cortantes o cortopunzantes el daño se encuen- con gran riesgo de desarrollar obstrucción de
tra circunscrito al trayecto del arma, con com- la vía aérea.

279
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COLUMNA CERVICAL Circulación. El examen del componente cir-


culatorio se inicia con la inspección en busca
En todo paciente que haya sufrido trauma del de heridas de la piel o huellas de sangrado
cuello debe considerarse que existe lesión de externo; se observa la simetría cervical y la
la columna cervical hasta que una evaluación posible presencia de hematomas en expan-
completa la haya descartado completamente. sión o de sangrado por la cavidad oral o nasal.
Esta evaluación incluye: examen clínico, estu- Se debe recordar que el sangrado de las lesio-
dio radiológico PA y lateral, proyecciones para nes cervicales no solamente tiene las conse-
la evaluación de las primeras dos vértebras cuencias hemodinámicas de toda hemorragia,
cervicales y la primera torácica y valoración sino que los hematomas en expansión pueden
por el neurocirujano. Por lo tanto, desde el mo- causar obstrucción progresiva de la vía aérea
mento mismo del trauma la columna cervical y amenazar seriamente la vida.
deberá mantenerse inmovilizada con un co-
llar cervical; en caso de tener que retirarlo para La evaluación de la circulación debe incluir el
el examen físico o para la realización de al- examen de las estructuras vasculares: presen-
gún procedimiento, un ayudante debe mante- cia de heridas sobre los trayectos vasculares,
ner la inmovilización tomando la cabeza fir- hematomas, huellas de sangrado, signos de
memente por los lados e impidiendo cualquier shock al ingreso, examen de los pulsos carotí-
movimiento de rotación, flexión o extensión. deos, temporales y de los miembros superio-
res; medición comparativa de las presiones
arteriales sistólicas de los miembros superio-
EXAMEN DEL CUELLO res; y finalmente, auscultación cuidadosa de
los trayectos vasculares para investigar
El examen físico del cuello debe centrarse en soplos.
el examen de las estructuras anatómicas que
contiene y en las manifestaciones clínicas de Daño neurológico. La evaluación neurológica
su lesión. del paciente con trauma cervical debe incluir
y registrar: el estado de conciencia al ingreso
Vía aérea. Se debe evaluar el estado de con- y su evolución posterior; el examen de las pu-
ciencia, la existencia de signos de dificultad pilas y del movimiento de las extremidades;
respiratoria, hemoptisis o heridas soplantes; el examen de los nervios craneanos (IX, dis-
escuchar el flujo de aire a través de la vía res- fagia; X, ronquera; XI incapacidad para ele-
piratoria para detectar estridor o respiración var el hombro y rotar el mentón hacia el hom-
ruidosa; valorar la calidad de la voz. Palpar bro opuesto; y XII paresia de la lengua); la
cuidadosamente el cartílago tiroides buscan- evaluación del plexo braquial; la investigación
do crepitación o la pérdida de su situación de síndrome de Horner; y el examen de la in-
central normal. tegridad de la médula espinal buscando
paraplejía, paraparesia o síndrome de hemi-
Ventilación. Ante la presencia de cualquier sección medular (Brown Sequard).
lesión cervical, especialmente cuando existe
trauma penetrante de la Zona I, debe prestar- Esófago y faringe. En todo paciente con trau-
se atención a la inspección, palpación, percu- ma cervical se debe descartar siempre una
sión y auscultación del tórax, buscando des- lesión del esófago. Inicialmente, durante la
cartar neumotórax a tensión o neumotórax evaluación clínica se investiga si hay queja
abierto. de disfagia, la presencia de sangre en la sali-

280
CAPÍTULO XXVI: TRAUMA DE CUELLO

va o en el aspirado gástrico, y la existencia de • Heridas por proyectil de arma de fuego en


heridas aspirantes; se palpa en busca de en- la Zona II.
fisema subcutáneo.

PACIENTE SIN COMPROMISO


TRATAMIENTO DEL TRAUMA HEMODINÁMICO
PENETRANTE
O RESPIRATORIO
A, B, C
El tratamiento del paciente que no presenta
Independientemente del mecanismo del trau- compromiso inicial respiratorio o hemorragia,
ma se debe vigilar la protección de la columna depende de la zona en la cual se halle la he-
cervical. Para el cuidado de la vía aérea se rida traumática:
siguen los principios establecidos en las guías
de manejo de la vía aérea.
ZONA I Y III
Cuando existan hematomas cervicales, espe-
Inicialmente se establece si la herida atraviesa
cialmente si son expansivos y aunque no exis-
el músculo platisma. De ser así y en todas las
ta compromiso establecido de la vía aérea,
heridas por proyectil de arma de fuego se re-
debe realizarse intubación precoz. Si ya exis-
quieren estudios complementarios para deter-
te la obstrucción se procede de inmediato a
minar las lesiones y la indicación de cirugía.
la intubación oro o nasotraqueal.

El sangrado profuso por la boca o la nariz, o ZONA II


la imposibilidad de intubar por vía naso u oro-
traqueal son indicaciones para establecer una Si la herida atraviesa el platisma y el examen
vía aérea quirúrgica (cricotiroidotomía). físico evidencia signos de lesión de alguna de
las estructuras del cuello (ver atrás el examen
Cuando existen heridas expuestas de la trá- del cuello) está indicada la exploración
quea, la manera de asegurar la vía aérea es quirúrgica.
la colocación de un tubo endotraqueal o de
una cánula de traqueostomía a través de la Cuando no existen signos que sugieran lesión
lesión. de las estructuras anatómicas del cuello, el
paciente puede ir a estudios complementarios.
Se debe iniciar el tratamiento de la ventila- En caso de no poder realizarlos se debe so-
ción y la circulación, de acuerdo con los prin- meter a exploración quirúrgica.
cipios establecidos en las guías respectivas.
RECUERDE: La exploración de las heridas
Indicaciones de intervención quirúrgica del cuello en Urgencias debe limitarse a de-
inmediata: terminar si atraviesan o no el platisma. En nin-
• Heridas penetrantes de la vía aérea. gún caso se deben remover coágulos o inten-
• Evidencia de sangrado activo. tar establecer el trayecto de una herida me-
• Hematoma en expansión. diante la exploración ciega con el dedo ni con
• Shock en presencia de heridas de la Zona I. algún instrumento.

281
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS ARTERIOGRAFÍA

Idealmente la angiografía debe incluir los cua-


RADIOGRAFÍA DEL CUELLO
tro vasos (carotídeos y vertebrales). El objeti-
vo de la realización de la angiografía en trau-
Permite localizar proyectiles o fragmentos y
matismo penetrante de la Zona I y III es cono-
evaluar la integridad de la columna cervical.
cer con exactitud las características de las
Puede mostrar hematomas de los tejidos blan-
lesiones vasculares de éstas zonas para pla-
dos incluyendo el espacio prevertebral, des-
near correctamente el abordaje quirúrgico.
viación o compresión de la columna de aire y
la presencia de enfisema subcutáneo. Cual- Está indicada en la evaluación de todas las
quiera de estos hallazgos indica lesión signi- lesiones penetrantes, vecinas a los trayectos
ficativa y una vez se haya completado la eva- vasculares de la Zona I y III siempre y cuan-
luación, determina indicación de cirugía. do las condiciones hemodinámicas y respira-
torias del paciente lo permitan. Los pacientes
con lesiones en la Zona II que presenten algún
RADIOGRAFÍA DEL TÓRAX signo de lesión vascular o tengan heridas por
proyectiles de arma de fuego, deben ser so-
Permite detectar la presencia de neumotórax, metidos a exploración quirúrgica.
hemotórax, ensanchamiento mediastinal,
cuerpo extraño, enfisema mediastinal o he- Otra indicación de arteriografía, frecuente en
matoma pleural apical (gorro). Está indicada nuestro medio, la constituyen las lesiones pro-
en todo paciente estable con lesión penetran- ducidas por proyectiles de carga múltiple, in-
te del cuello, particularmente en lesiones lo- dependientemente de la Zona en la cual se
calizadas en la Zona I. encuentre localizada las heridas.

ENDOSCOPIA Y ESOFAGOGRAMA TOMOGRAFÍA COMPUTADORIZADA

La combinación de estos dos estudios es lo La tomografía computadorizada está indica-


suficientemente sensible para detectar la to- da en el diagnóstico de lesiones del confluen-
talidad de las lesiones del esófago. Sin em- te laringotraqueal, como complemento de la
bargo, el empleo de uno solo de ellos dismi- laringoscopia y la broncoscopia.
nuye notablemente su sensibilidad y especifi-
cidad. Cuando los estudios son negativos y
existe enfisema subcutáneo, el paciente debe INDICACIONES DE CIRUGÍA
ser llevado a cirugía. Están indicadas en le- EN TRAUMA PENETRANTE:
siones penetrantes de la Zona I, o en aquellas
lesiones de la Zona II en las cuales se ha op- CIRUGÍA INMEDIATA
tado por tratamiento selectivo con base en los
hallazgos de los estudios complementarios. • Signos evidentes de sangrado activo.
• Heridas penetrantes de la vía aérea.
• Hematoma en expansión.
• Shock en presencia de heridas de la Zona I.
• Heridas por proyectil de arma de fuego en
la Zona II.

282
CAPÍTULO XXVI: TRAUMA DE CUELLO

CIRUGÍA DESPUÉS DE ESTUDIOS RADIOGRAFÍA DE TÓRAX


COMPLEMENTARIOS
Las radiografías anteroposterior y lateral del
• Radiografía del cuello positiva (enfisema, tórax se examinan buscando hemo o neumo-
hematoma). tórax, enfisema o ensanchamiento mediasti-
• Endoscopia y esofagograma positivos. nal, fracturas costales especialmente de las
• Enfisema subcutáneo con esofagograma dos primeras costillas (asociadas a lesión de
y endocopia normales. los grandes vasos).
• Heridas por proyectil de arma de fuego en
la Zona II.
ENDOSCOPIA Y ESOFAGOGRAMA
• Heridas penetrantes de la Zona II con cual-
quier signo de lesión vascular, disgestiva o Aunque la ruptura del esófago por trauma ce-
de la vía aérea. rrado es extremadamente rara, ante la pre-
• Arteriografía con evidencia de lesión sencia de enfisema subcutáneo encontrado
vascular. en el examen clínico o enfisema mediastinal
visto en los estudios radiológicos, deben prac-
ticarse estos estudios.
TRATAMIENTO DEL TRAUMA
CERRADO
ARTERIOGRAFÍA
A,B,C
La presencia de signos clínicos de lesión vas-
Proceder conforme a lo ya expuesto en ésta cular, el déficit neurológico no explicado por los
guía para el cuidado de la vía aérea, de la hallazgos de una tomografía cerebral, o signos
ventilación y de la circulación. No se debe olvi- radiológicos de hematoma mediastinal, indican
dar que la estructura cervical mas frecuente- la práctica de angiografía de los cuatro vasos.
mente lesionada en trauma cerrado es la co-
lumna cervical, y por lo tanto debe mantener-
se la inmovilización hasta que se haya des- TOMOGRAFÍA AXIAL COMPUTADORIZADA
cartado completamente ese compromiso.
Las indicaciones para practicar TAC del cue-
llo en trauma cerrado son la evaluación de la
ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS laringe y la evaluación de fracturas o lesiones
complejas de la columna vertebral o de la
RADIOGRAFÍA DE CUELLO médula espinal.

Evalúa en primer lugar la integridad de la co-


lumna cervical. Para ello el estudio debe incluir INDICACIONES DE CIRUGÍA EN
radiografías anteroposteriores, laterales, tran- TRAUMA CERRADO
sorales y transaxilares. Se busca también la
presencia de hematoma de los tejidos blan- • Lesión de la vía aérea.
dos, desviación o alteraciones de la columna • Lesión del esófago.
de aire o la presencia de enfisema subcu- • Lesión vascular demostrada en la arterio-
táneo. grafía.
• Lesión de laringe.

283
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS 10. Levin BA. Current Practice of Trauma Surgery. Pri-
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284
CAPÍTULO XXVII: MANEJO INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

CAPÍTULO XXVII

Manejo inicial del paciente politraumatizado

Jorge Alberto Ospina, MD, FACS


Profesor Asociado
Departamento de Cirugía,
Universidad Nacional de Colombia.
Director Médico,
Clínica del Country

E l trauma constituye uno de los principales


problemas de salud pública en el mundo
y, particularmente, en Colombia, por su alta
rables, existen otras de carácter familiar y
social verdaderamente inconmensurables.

incidencia y sus implicaciones sociales, eco-


nómicas y morales. MEDIDAS DE PROTECCIÓN
En los Estados Unidos es la primera causa Todo paciente que ingrese a un servicio de
de muerte en menores de 45 años y la cuarta urgencias debe ser considerado portador po-
en todos los grupos de edad. El costo anual tencial de enfermedades transmisibles y por
generado por las lesiones traumáticas alcan- tanto todo el personal debe observar las Me-
za un promedio de 118.000 millones de dóla- didas Universales de Protección:
res. A pesar de la atención que sobre este gra-
ve problema se ha generado en las últimas 1. Uso de guantes, mascarilla (tapabocas),
décadas, las estadísticas muestran números anteojos, polainas y ropa impermeable,
crecientes de muertes previsibles y de pacien- para proteger la piel y las mucosas de cual-
tes inhabilitados. quier contacto con sangre o líquidos cor-
porales.
En Colombia el problema es aún mas grave. 2. Manejo cuidadoso de los elementos corto-
Según datos publicados por el Departamento punzantes (agujas, hojas de bisturí y otros
Administrativo Nacional de Estadística (DANE) elementos cortantes). Las agujas no deben
de Colombia, las muertes violentas ocupan el reenfundarse, doblarse ni desprenderse de
primer lugar entre las causas de mortalidad, las jeringas. Todos estos elementos, una
por encima del cáncer y de las enfermedades vez utilizados, deben depositarse en reci-
cardiovasculares. pientes especialmente diseñados para ese
propósito.
El grupo de población más afectado se en- 3. Manejo adecuado de sangre, líquidos cor-
cuentra entre los 15 y los 45 años, (promedio porales y tejidos. Incluye no sólo el mane-
de 23 años) con resultados económicos ne- jo de las muestras en el área de urgencias,
fastos por la pérdida de años de vida produc- sino también su transporte y manipulación
tiva. Además de estas consecuencias ponde- en el laboratorio.

285
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

4. Lavado inmediato de las manos y superfi- vés del Curso Advanced Trauma Life
cies corporales si se contaminaron con Support (ATLS), se conoce como Evaluación
sangre u otros fluidos corporales, antes y Inicial y comprende tres fases:
después del contacto con los pacientes y
siempre después de retirarse los guantes. I. Revisión Primaria
II. Resucitación
III. Revisión Secundaria
PREPARACIÓN
Si bien a continuación se separan estas tres
El área de urgencias debe disponer de un sitio fases con fines didácticos, en la práctica es-
especial para la atención de pacientes trauma- tos procesos se llevan a cabo en forma simul-
tizados, en el cual se disponga de inmediato tánea y se repiten cíclicamente.
de los elementos y el personal necesarios para
su atención. Estos elementos son realmente La Revisión Primaria y Secundaria deben re-
cosas sencillas y se encuentran disponibles petirse con frecuencia durante el proceso de
en cualquier hospital: atención, con el fin de detectar cualquier con-
dición de deterioro del paciente y establecer
Elementos necesarios en un servicio de ur- su tratamiento inmediato.
gencias para la atención inicial del trauma

Oxígeno (máscaras, nebulizadores) I Y II REVISIÓN PRIMARIA Y RESUCITACIÓN


Collar cervical semirrígido
Succionador (cánulas rígidas) Su objetivo es evaluar de una forma rápida y
Cánulas orofaríngea y nasofaríngea
precisa las funciones vitales y de inmediato
Tubos endotraqueales (de varios números)
Laringoscopio (con hojas curvas y rectas) proceder al tratamiento de cualquier lesión que
Bolsa reservorio de oxígeno amenace la vida. Utiliza la nemotecnia (inicial-
Catéteres plásticos No. 14 o 16 Fr mente en inglés) A, B, C, D, E y comprende:
Jeringas
Tubos de tórax y trampas de agua A. Vía Aérea con control de la columna cervical.
Lactato de Ringer o Solución Salina Normal B. Respiración y Ventilación.
Apósitos y compresas estériles C. Circulación con control de la hemorragia.
Inmovilizadores para fracturas
D. Daño neurológico.
Tablas espinales largas
Equipo de pequeña cirugía E. Exposición del paciente con prevención de
la hipotermia.

La secuencia A, B, C, D, E debe seguirse es-


EVALUACIÓN INICIAL trictamente; sólo cuando se ha evaluado y tra-
tado completamente A, se procede a evaluar
Para el diagnóstico y tratamiento de las lesio- y tratar la respiración o punto B, y así suce-
nes que amenazan la vida del paciente cuan- sivamente. Si durante esta secuencia ocurre
do ingresa al servicio de urgencias, el tiempo un deterioro en uno de los pasos anteriores,
es esencial. Es necesario seguir un esquema el proceso deberá comenzar de nuevo.
ordenado, rápido, sencillo, fácil de recordar y
de aplicar. Este esquema ha sido difundido Aunque los mecanismos del trauma y las ca-
por el Colegio Americano de Cirujanos a tra- racterísticas anatómicas y fisiológicas del niño

286
CAPÍTULO XXVII: MANEJO INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

son diferentes de las del adulto y requieren te excluir lesión de la columna. Unicamente
estudio especial, las prioridades de evaluación puede descartarse después de haber practi-
y manejo continúan siendo las mismas. En la cado un estudio radiológico completo del cue-
mujer embarazada también existen cambios llo que examine las siete vértebras cervicales
anatómicos y fisiológicos que modifican el y la primera torácica. Como obtener radiogra-
manejo, pero al igual que en el niño y el adul- fías no es prioritario durante la Revisión Pri-
to las prioridades son exactamente iguales. maria, la inmovilización cervical debe mante-
nerse hasta que las condiciones del paciente
Durante la Revisión Primaria el médico no uti- permitan hacer estudios radiológicos y eva-
liza otro recurso diagnóstico que sus sentidos: luación por el neurocirujano.
está atento, observa, palpa, y escucha; no
emplea el laboratorio ni las imágenes.
DIAGNÓSTICO DE LA VÍA AÉREA
A. VÍA AÉREA CON CONTROL
DE LA COLUMNA CERVICAL Para el diagnóstico de compromiso de la vía
aérea hay que tener en cuenta dos situacio-
La principal causa de muerte en los pacien- nes: los pacientes que presentan obstrucción
tes traumatizados es la incapacidad para pro- ya establecida, con la sintomatología corres-
porcionar oxígeno al cerebro y demás estruc- pondiente, y aquellos que tienen el riesgo de
turas vitales. Por esta razón la primera priori- desarrollarla. En ambas circunstancias debe
dad consiste en lograr una vía aérea permea- procederse a la corrección inmediata.
ble y segura, que permita suministrar oxíge-
no y asegurar que llega a los pulmones para Signos de Obstrucción de la Vía Aérea:
un adecuado intercambio gaseoso.
• Agitación.
Debe suponerse que todo paciente traumati- • Alteración de la conciencia.
zado tiene lesión de la columna cervical has- • Retracciones intercostales y empleo de los
ta que se demuestre lo contrario. Todas las músculos accesorios.
maniobras tendientes a evaluar y asegurar la • Respiración ruidosa: estridor o ronquidos.
vía aérea deben hacerse con protección de la
columna cervical. Esta protección consiste en Hacer al paciente una pregunta sencilla, por
evitar los movimientos de flexión, extensión y ejemplo su nombre, permite evaluar el esta-
rotación de la cabeza, se logra mediante el do de conciencia, el esfuerzo respiratorio, la
empleo de un collar cervical semi-rígido, o en calidad de la voz y la presencia de ruidos res-
su defecto, con un asistente que sujete firme- piratorios anormales. En un paciente que ha-
mente con las manos la cabeza por los lados, bla claramente puede decirse que la vía aé-
evitando cualquier movimiento del cuello. rea no está comprometida.

La historia del traumatismo, especialmente Pacientes con Riesgo de Obstrucción de


cuando ha ocurrido por encima de los hom- la Vía Aérea:
bros o por mecanismos de aceleración o desa-
celeración, es suficiente para sospechar le- • Paciente inconsciente con trauma
sión de la columna cervical. La ausencia de craneoencefálico.
signos neurológicos, espasmo muscular, do- • Paciente bajo efectos de drogas o alcohol.
lor, crepitación o escalones óseos, no permi- • Trauma maxilo-facial severo.

287
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Trauma cervical. pacientes conscientes por la posibilidad de


• Trauma torácico. inducir vómito y broncoaspiración.
• Negativa para acostarse en decúbito supino.
Vía Aérea Definitiva: el establecimiento de
En este grupo de pacientes el médico debe una vía aérea definitiva consiste en colocar
estar alerta para detectar cualquier signo que un tubo dentro de la tráquea, inflar el balón
indique inminencia de compromiso de la vía para prevenir la aspiración de contenido gás-
aérea y proceder a su corrección inmediata. trico, asegurarlo debidamente y conectarlo a
En ocasiones, es preferible adelantarse a los una fuente de oxígeno. Existen tres formas
signos clínicos y “prevenir” la obstrucción. Esto de conseguirla y la escogencia de una u otra
es especialmente cierto en pacientes con trau- depende de cada situación clínica particular:
ma maxilofacial y cervical, en quienes el ma-
nejo inicial “preventivo” de la obstrucción de 1. Intubación orotraqueal: es la ruta con la
la vía aérea puede ser relativamente fácil, pero cual el médico se encuentra más familiariza-
una vez establecida la obstrucción se hace do y la de elección en la mayoría de los pa-
extremadamente difícil. cientes. Es útil en casi todas las situaciones,
pero puede ser difícil cuando existe trauma
de las estructuras de la boca, del maxilar
MANEJO DE LA VÍA AÉREA inferior o sangrado de la cavidad oral.

El manejo de la vía aérea sigue una secuen- 2. Intubación nasotraqueal: es una técnica
cia bien establecida: hay medidas iniciales, útil cuando se confirma o sospecha lesión
otras de mantenimiento y otras definitivas. de columna cervical y en aquellos pacien-
tes con traumatismo extenso de la estruc-
Medidas iniciales: consisten en la adminis- turas de la boca y el maxilar inferior. Sin
tración inmediata de oxígeno, la remoción de embargo, no es posible practicarla en pa-
detritus, vómito, sangre, secreciones, piezas cientes apneicos y es peligrosa cuando
dentales u otros cuerpos extraños que pue- existe evidencia de lesión de la lámina
dan obstruir la vía aérea superior. La cavidad cribiforme.
oral se explora con los dedos y mediante un
aspirador, preferiblemente rígido, se limpia 3. Vía aérea quirúrgica: cuando no ha sido
completamente. posible establecer una vía aérea por los
métodos anteriores, cuando existe un trau-
Medidas de mantenimiento: en pacientes matismo facial extenso o sangrado orofa-
con compromiso de la conciencia, la lengua ríngeo profuso, es necesario instaurar una
cae hacia atrás y obstruye la hipofaringe; en vía aérea por métodos quirúrgicos. Inicial-
ellos es útil la elevación anterior del mentón, mente puede practicarse punción con aguja
el levantamiento de la mandíbula desde los de la membrana cricotiroidea para admi-
ángulos maxilares o el empleo de cánulas nistrar oxígeno, y posteriormente realizar
naso u orofaríngeas. El uso de cánulas nasofa- cricotiroidotomía quirúrgica. La traqueosto-
ríngeas debe evitarse cuando se sospecha mía es un procedimiento complejo, con alta
fractura de la lamina cribiforme (existencia de incidencia de complicaciones; por esta ra-
equimosis periorbitaria, hemorragia nasal o zón su empleo durante la fase inicial de
rinoliquia), por el riesgo de producir lesión ce- manejo del paciente traumatizado ha sido
rebral. No se utilizan cánulas orofaríngeas en abandonado.

288
CAPÍTULO XXVII: MANEJO INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

B. VENTILACIÓN Un neumotórax abierto debe convertirse en


neumotórax cerrado cubriendo el defecto con
La permeabilidad de la vía aérea no asegura un apósito que se fija con esparadrapo en tres
el adecuado suministro de oxígeno a los teji- lados, dejando uno libre; luego se coloca un
dos. También es necesario que exista inter- tubo de tórax en el sitio señalado.
cambio gaseoso normal, lo cual implica la in-
tegridad funcional del aparato respiratorio. C. CIRCULACIÓN CON CONTROL
DE HEMORRAGIA

DIAGNÓSTICO DE LA VENTILACIÓN Entre las causas de muerte precoz del pacien-


te traumatizado en el servicio de urgencias se
Para evaluar la ventilación se debe exponer destaca la hemorragia, la cual puede respon-
completamente el tórax; inspeccionar la sime- der al tratamiento.
tría de la caja torácica, la amplitud de movi-
mientos de ambos hemitórax, buscar heridas Debe suponerse que cualquier grado de hipo-
y distensión de las venas del cuello; palpar el tensión en un paciente traumatizado es se-
tórax para identificar fracturas, dolor, o enfi- cundario a hemorragia, hasta que se demues-
sema subcutáneo, y el cuello para establecer tre lo contrario. Asegurada la vía aérea y la
la posición de la traquea; percutir para eva- ventilación, se procede con la evaluación del
luar la matidez o hiperresonancia del tórax; estado hemodinámico.
auscultar la calidad y simetría de los ruidos
respiratorios.
DIAGNÓSTICO DE LA CIRCULACIÓN
En esta fase el esfuerzo del médico debe diri-
girse a excluir el diagnóstico de tres lesiones La evaluación del estado circulatorio del pa-
que ponen en riesgo la vida del paciente ciente traumatizado se basa en cuatro elemen-
traumatizado: tos sencillos:

• Neumotórax a tensión. 1. Estado de conciencia: a medida que dis-


• Neumotórax abierto. minuye el volumen circulante, la perfusión
• Tórax inestable con contusión pulmonar. cerebral se compromete y el estado de con-
ciencia se altera. Un estado de agitación
psicomotora en un paciente traumatizado
MANEJO DE LA VENTILACIÓN debe considerarse como indicador de hipo-
xia cerebral y no atribuirlo a tóxicos.
Se debe verificar la permeabilidad de la vía 2. Color de la piel: después del trauma, una
aérea y continuar el suministro de oxígeno. piel rosada, especialmente en la cara y las
extremidades, prácticamente excluye hipo-
Si existe neumotórax a tensión, debe tratarse volemia crítica. En contraste, una piel páli-
de inmediato mediante la colocación de una da, fría, sudorosa y de color cenizo es sig-
aguja en el tercer espacio intercostal sobre la no inequívoco de hipovolemia severa.
línea medio clavicular y a continuación colo- 3. Examen de las venas del cuello: la ingurgi-
car un tubo de tórax en el quinto espacio tación de las venas del cuello sugiere que
intercostal con línea axilar media. el colapso circulatorio se debe a tapona-
miento cardíaco o a neumotórax a tensión;

289
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

por el contrario, unas venas vacías indican puesta clínica: mejoría del estado de concien-
hipovolemia. cia, disminución de la frecuencia y mayor
4. Pulsos: se deben palpar los pulsos centra- amplitud del pulso, mejoría de la coloración
les (femorales y carotídeos) y establecer de la piel y del gasto urinario. Si la respuesta
su amplitud, ritmo y frecuencia. Unos pul- es favorable se puede disminuir la infusión de
sos amplios, regulares y de frecuencia nor- líquidos; si es transitoria o no existe, debe
mal indican volemia normal. Por el contra- continuarse la administración de líquidos.
rio la disminución de la amplitud y el au-
mento de la frecuencia son signos de Al tiempo con la restitución de la volemia es
hipovolemia. necesario identificar la fuente de hemorragia
para proceder a controlarla.

MANEJO DE LA CIRCULACIÓN Control de la hemorragia: las perdidas san-


guíneas en un paciente traumatizado pueden
El manejo del compromiso circulatorio del tener solamente uno de los siguientes cinco
paciente traumatizado tiene dos componen- orígenes:
tes esenciales:
• Hemorragia externa.
Restitución de la volemia: se deben canali- • Tórax.
zar al menos dos venas periféricas con catéte- • Abdomen.
res plásticos cortos y de grueso calibre (No. • Pelvis.
14 ó 16 Fr). Se prefieren en general las venas • Fracturas de huesos largos.
de los miembros superiores, evitando canali-
zar las venas que crucen los sitios lesiona- El control de la hemorragia externa debe ha-
dos. En caso de tener dificultades para cana- cerse por presión directa con la mano; el uso
lizar una vena por punción percutánea, se de torniquetes causa isquemia y lesiona los
debe recurrir a la disección de las venas de tejidos; el empleo a ciegas de pinzas hemostá-
los miembros superiores o de la safena en la ticas usualmente es infructuoso, toma tiempo
región premaleolar o inguinal. La safena debe y puede agravar el daño existente en las es-
evitarse en pacientes con traumatismo abdo- tructuras neurovasculares. El manejo de la
minal penetrante en quienes pueda suponerse hemorragia intratorácica e intraabdominal re-
lesión de la vena cava inferior. El cateterismo quiere cirugía inmediata.
de las venas centrales, subclavias o yugulares
internas, debe evitarse en el paciente con trau- La hemorragia pélvica se puede autocontrolar
ma por el riesgo de agravar las lesiones exis- dentro de los tejidos blandos y musculares de
tentes con las complicaciones propias de este la pelvis. Sin embargo, las decisiones pueden
procedimiento. Una vez canalizadas las ve- ser complejas y requerir manejo multidiscipli-
nas, se toman muestras para hemoclasifi- nario, en el cual deben participar el cirujano
cación y pruebas cruzadas, estudios de labo- general para excluir la hemorragia abdominal,
ratorio clínico y toxicológico y prueba de em- el ortopedista para practicar la fijación exter-
barazo en las mujeres en edad fértil. na y el radiólogo para la práctica de emboli-
zación angiográfica selectiva.
Inicialmente se infunden 2 litros de solución
electrolítica balanceada (Lactato de Ringer o Durante el manejo circulatorio deben insertar-
Solución Salina Normal) y se observa la res- se sondas vesical y gástrica:

290
CAPÍTULO XXVII: MANEJO INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

Sonda vesical: la colocación de sonda vesical las causas mas frecuentes: hipoxia cerebral y
tiene como objetivo principal facilitar la medi- trauma craneoencefálico.
ción de la diuresis, que es el mejor parámetro
indicador de la volemia. En los hombres con El examen de las pupilas se limita durante la
trauma cerrado no debe colocarse sonda ure- revisión primaria a evaluar su tamaño, sime-
tral mientras no se haya inspeccionado el mea- tría y la respuesta a la luz. Toda asimetría en
to urinario en búsqueda de sangre, examina- el diámetro pupilar mayor de 1mm se consi-
do el periné para determinar la presencia de dera anormal.
equimosis y practicado tacto rectal para eva-
luar la ubicación normal de la próstata. La pre- E. EXPOSICIÓN DEL PACIENTE
sencia de cualquier hallazgo anormal durante Y PREVENCIÓN DE LA HIPOTERMIA
esta evaluación contraindica la colocación de
sonda uretral. El paciente debe desvestirse completamen-
te, cortando la ropa en caso necesario para
Sonda gástrica: la sonda nasogástrica se co- facilitar su evaluación completa. Una vez des-
loca para disminuir la distensión del estóma- nudo debe cubrirse con mantas secas y tibias
go y el riesgo de broncoaspiración. La presen- para prevenir la hipotermia. Lo ideal, y tal vez
cia de equimosis periorbitaria debe alertar so- la mejor medida en la prevención de la hipo-
bre la existencia de fractura de la lámina cribo- termia, es la administración de las soluciones
sa y contraindica el paso de la sonda por la electrolíticas tibias (39°C). Para ello puede
nariz pues hay riesgo de introducirla en la cavi- ultilizarse un horno microondas que permita
dad craneana. En esta situación el paso de- calentar los líquidos hasta alcanzar esta tem-
berá hacerse por la boca. peratura. La sangre y sus derivados no se
deben calentar por este sistema.
D. DAÑO NEUROLÓGICO

La Revisión Primaria termina con una rápida REVISION SECUNDARIA


evaluación neurológica, cuyo objetivo es es-
tablecer el estado de conciencia, el tamaño y Cuando está completa la Revisión Primaria,
la reacción de las pupilas. Debe comprobar- iniciada la Resucitación y los parámetros del
se si el paciente está alerta, si hay respuesta ABC se encuentran controlados, se comien-
a estímulos verbales o solamente a estímulos za la Revisión Secundaria.
dolorosos o si está inconsciente. La califica-
ción en la Escala de Coma de Glasgow se La Revisión Secundaria comprende cuatro
lleva a cabo durante la evaluación secundaria. aspectos:
• Reevaluación frecuente del ABC.
La alteración de la conciencia puede ser de- • Anamnesis.
bida a hipoxia cerebral o ser consecuencia de • Examen físico.
traumatismo craneoencefálico. Por esta razón, • Estudios diagnósticos.
ante un paciente con cambios de conciencia
deben reevaluarse frecuentemente el estado
de la vía aérea, la ventilación y el compromi- REEVALUACIÓN FRECUENTE DEL ABC
so hemodinámico. Para hacer diagnóstico de
alteración de la conciencia secundaria a in- Como se ha insistido, durante todo el proce-
toxicación, siempre deben excluirse primero so de Evaluación Inicial del Paciente Traumati-

291
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

zado, el estado de la vía aérea, la protección neurológico del paciente traumatizado que
de la columna cervical, la función respirato- permita detectar precozmente cualquier de-
ria, el estado circulatorio y la evolución neuro- terioro. El examen incluye la evaluación del
lógica deben ser periódicamente reevaluados estado de conciencia mediante la Escala de
buscando cualquier signo de deterioro. Coma de Glasgow, el examen de simetría y
respuesta pupilar a la luz y la simetría de los
movimientos de las extremidades.
ANAMNESIS
Escala de Coma de Glasgow: permite esta-
Durante la evaluación secundaria, todos los blecer una medida del estado de conciencia.
aspectos relacionados con los mecanismos Se califica de 3 a 15 y el puntaje obtenido es
del trauma, la escena del accidente, el esta- el resultado de la sumatoria de tres compo-
do inicial, la evolución y los antecedentes se nentes:
averiguan interrogando al paciente, a sus fa-
miliares o al personal que prestó la atención a. Apertura Ocular: se califica de 1 a 4 pun-
prehospitalaria. tos. No se evalúa cuando los ojos están
cerrados por edema.
En el registro de los antecedentes deben in- • Espontánea (normal): 4.
cluirse las alergias, el empleo de medicamen- • Al llamado: 3.
tos, las enfermedades sufridas con anteriori- • Al dolor: 2.
dad al trauma, la hora de la última comida y la • Ninguna respuesta: 1.
ingestión de alcohol o el consumo de otras
substancias psicoactivas. b. Respuesta Verbal: se califica de 1 a 5 pun-
tos. No se evalúa cuando el paciente no
puede hablar (por ejemplo, por intubación):
EXAMEN FÍSICO • Orientado: 5.
• Conversación confusa: 4.
La revisión secundaria incluye el examen com- • Lenguaje Incoherente: 3.
pleto y detallado del paciente, desde la cabe- • Sonidos Incomprensibles: 2.
za hasta los pies, por delante y por detrás, • Ninguna respuesta: 1.
pasando por todos y cada uno de los segmen-
tos corporales. c. Mejor respuesta motora: se califica de 1 a
6. Evalúa la mejor respuesta motora de
Cabeza: se examina completamente la cabe- cualquiera de las extremidades:
za para identificar heridas, contusiones, de- • Obedece órdenes: 6.
presiones, hemorragia nasal u otorragia, equi- • Localiza un estímulo doloroso: 5.
mosis periorbitarias o retroauriculares; estas • Retirada ante el estímulo doloroso: 4.
últimas hacen sospechar fracturas de la base • Flexión anormal (decorticación): 3.
del cráneo. Se examinan cuidadosamente los • Respuesta en extensión (descerebra-
ojos, los oídos y la nariz. ción): 2.
• Sin movimiento: 1.
Examen Neurológico: durante la Revisión
Secundaria se realiza un examen neurológico Respuesta de las pupilas: el examen de las
detallado y completo; es muy importante la pupilas tiene dos componentes: simetría y res-
evaluación repetida y continua del estado puesta a la luz. El hallazgo de una diferencia

292
CAPÍTULO XXVII: MANEJO INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

mayor de 1 mm entre las dos pupilas se semirígido tipo Filadelfia. En caso de tener que
considera anormal. La respuesta a la luz se retirarlo, debe mantenerse con inmovilización
evalúa por la rapidez. Una respuesta lenta es manual que limite cualquier movimiento de la
anormal. cabeza.

Déficit motor lateralizado: inicialmente se ob- El examen del cuello se completa inspeccio-
serva el movimiento espontáneo de las extre- nando la simetría, la existencia de hematomas
midades o en su defecto ante un estímulo o signos de sangrado, la presencia de heri-
doloroso. Un movimiento retardado, disminui- das que atraviesen el platisma y el estado de
do o que requiere mayor estímulo se consi- las venas del cuello; palpando la posición de
dera anormal. la tráquea, la existencia de enfisema subcu-
táneo y las características de los pulsos; fi-
El examen neurológico no sólo se practica ini- nalmente, auscultando los trayectos vascula-
cialmente sino debe repetirse y registrarse fre- res en búsqueda de soplos.
cuentemente durante la evaluación inicial.

TÓRAX
MAXILO-FACIAL
Se inspecciona la simetría de la caja torácica y
El tratamiento del traumatismo maxilo-facial la amplitud de los movimientos respiratorios;
que no ocasiona obstrucción de la vía aérea se exploran heridas o segmentos costales con
o hemorragia importante puede diferirse has- respiración paradójica; se palpa buscando cre-
ta que se haya estabilizado completamente pitación secundaria a fracturas o a la existencia
el paciente. Sin embargo, debe tenerse cui- de enfisema subcutáneo; se percute para iden-
dado especial en detectar aquellos casos que tificar zonas de matidez o hiperresonancia; fi-
durante su evolución tienen el riesgo de pre- nalmente se ausculta la simetría y característi-
sentar compromiso de la vía aérea para ma- cas de los ruidos respiratorios, y la intensidad,
nejarlos precozmente. ritmo y frecuencia de los ruidos cardíacos.

COLUMNA CERVICAL Y CUELLO ABDOMEN

En todo paciente con traumatismo cerrado por En el examen abdominal, como en el del tó-
encima de los hombros debe suponerse que rax deben incluirse tanto la cara anterior como
existe lesión de la columna cervical hasta que la posterior. Además, el examen de la parte
se demuestre lo contrario. La ausencia de baja del tórax y los glúteos. En la inspección
dolor, espasmo muscular, escalones óseos o se investigan contusiones, laceraciones, equi-
signos neurológicos no la excluye. La única mosis, o heridas y se observa su contorno; se
manera de descartarla es un estudio radioló- palpa buscando fracturas de los últimos ar-
gico completo que incluya proyecciones ante- cos costales, zonas de dolor, defensa muscu-
roposterior y lateral y otras transorales o trans- lar o signos de irritación peritoneal; se percute
xilares que permitan examinar completamen- para identificar áreas de matidez o de dolor
te las siete vértebras cervicales y la primera que alertan sobre la existencia de irritación
torácica. Mientras esta lesión se descarta, el peritoneal; finalmente se ausculta registrando
paciente debe permanecer con un collar la calidad de los ruidos intestinales.

293
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Un examen abdominal equívoco debido a al- La evaluación de todo paciente traumatizado


teraciones en el estado de conciencia, la pér- debe incluir tres radiografías:
dida inexplicada de sangre o un examen du-
doso, son indicaciones para practicar lavado Columna cervical que incluya las siete vér-
peritoneal diagnóstico o ecografía en el servi- tebras cervicales y la primera torácica. Una
cio de urgencias con el único fin de estable- radiografía de columna cervical normal no
cer la presencia de líquido intraperitoneal. excluye ninguna lesión y, por lo tanto, la in-
movilización cervical debe mantenerse hasta
tener una valoración especializada del pacien-
PERINÉ, RECTO, VAGINA te. El médico de urgencias coloca collares
cervicales, no los retira.
El periné debe ser inspeccionado en busca de
contusiones, heridas, equimosis o sangrado Tórax: ante la evidencia de neumotórax a ten-
uretral. El tacto rectal nunca debe omitirse du- sión, neumotórax abierto o tórax inestable, la
rante la evaluación secundaria; permite esta- prioridad es lograr óptimo intercambio gaseo-
blecer la presencia de sangre en el tracto intes- so mediante una adecuada expansión pulmo-
tinal, la posición de la próstata, la integridad de nar. La radiografía se realiza una vez que se
las paredes rectales y el tono del esfínter anal. haya completado este objetivo durante la
El tacto vaginal puede mostrar la presencia de resucitación.
laceraciones vaginales o sangrado genital.
Pelvis: es de gran ayuda para comprobar la
existencia de lesión traumática de la pelvis en
MÚSCULO-ESQUELÉTICO paciente víctima de trauma cerrado, especial-
mente en aquellos casos que no es posible
El examen del aparato músculo-esquelético establecer el origen de un estado hipovolé-
incluye la inspección y palpación de las extre- mico o cuando el examen de la pelvis es
midades en busca de contusiones, heridas, equívoco.
deformidades o dolor que hagan sospechar
fracturas sobre el pubis y las crestas ilíacas
para examinar la pelvis y las articulaciones que ECOGRAFÍA ABDOMINAL
se presuman lesionadas. La evaluación de las
extremidades incluye siempre el examen de Es un método rápido, portátil, no invasor, poco
los pulsos, color, perfusión y temperatura de costoso y fácil de repetir en la sala de urgen-
la piel, a fin de establecer la integridad del sis- cias. Por estas razones su uso se ha extendi-
tema vascular. do y ha llegado a sustituir en la práctica diaria
al lavado peritoneal diagnóstico.

ESTUDIOS DIAGNÓSTICOS El método es especialmente útil para estable-


cer la presencia de líquido intraperitoneal, y
Cuando se completa el examen físico, se han tanto no evaluar la morfología de los órganos
asegurado y reevaluado los parámetros del A abdominales.
B C y la estabilidad del paciente lo permite,
se procede con los estudios diagnósticos co- Se examinan secuencialmente la región subxi-
mo radiografías, lavado peritoneal, ecografía foidea para determinar la presencia de líqui-
abdominal, tomografías, y otros. do intrapericárdico, posteriormente la fosa

294
CAPÍTULO XXVII: MANEJO INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

hepato-renal (Saco de Morrison), la fosa 9. Gentilello LM. Advances in the management of


espleno-renal y finalmente el área suprapú- hypothermia. Surg Clin North Am 1995; 75:243-256.
10. Ho AM, Fung KY, Joynt GM, Karmakar MK, Peng
bica, donde se puede visualizar la ocupación
Z. Rigid cervical collar and intracranial pressure
del fondo de saco de Douglas, el contorno of patients with severe head injury. J Trauma 2002;
vesical y la ocupación pélvica por hematoma. 53:1185-1188.
11. Levin BA, Copeland EM, Howard RJ. Current
El proceso de Evaluación Inicial está funda- Practice of Trauma Surgery. Churchill Livingstone.
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12. Mattox KL, Moore EE, Feliciano MD. Trauma.
estudio paraclínico reemplaza las etapas an-
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tes mencionadas y menos aún el buen juicio. 13. McDonald JW, Sadowsky C. Spinal-cord injury.
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17. Nunnink L. Blunt carotid artery injury. Emerg Med
2. Bayir H, Clark RS, Kochanek PM. Promising
2002; 14:412-21.
strategies to minimize secondary brain injury after
18. Ospina A. Paciente politraumatizado: evaluacion
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y manejo inicial. Med UIS 1997;11:228-239.
3. Becker DP, Miller D, Young H, et al. Textbook of
19. Ordoñez C, Ferrada R, Buitrago R. Cuidado In-
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2002; 20:953-974. critical care overview. Crit Care Med 2002;
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4:106-107. Med 2002; 30:478S-488S.

295
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXVIII

Manejo general del trauma vascular abdominal

Fernando Guzmán Mora, MD


Jefe, Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

Edgar Giovanni Ríos, MD


Jefe de Internos
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a lesión de los vasos sanguíneos abdomi-


nales no es tan evidente, al contrario de lo
que ocurre con las lesiones vasculares periféri-
El trauma vascular puede ser penetrante, ce-
rrado o iatrogénico. La mayor parte de los ca-
sos de trauma vascular abdominal son pene-
cas. La mayoría de la información pertinente trantes, y fatales en 20 - 40% de los casos.
proviene de estudios militares y de guerra, los
cuales han contribuido de una manera impor- El 60% de los pacientes con trauma aórtico,
el 30% con herida de cava y el 50% con herida
tante al entendimiento del trauma vascular.
de arteria ilíaca, mueren antes de llegar al hos-
Los datos más completos son los del trauma
pital. La mortalidad hospitalaria es casi la mis-
vascular penetrante por armas de guerra,
ma que la prehospitalaria.
mientras la información sobre las lesiones pro-
ducidas en accidentes de tránsito es más li- En los accidentes de tránsito los vasos me-
mitada. Sin embargo, en épocas más recien- sentéricos son los más frecuentemente afec-
tes, dados los avances tecnológicos y el au- tados en el trauma abdominal, mientras la
mento de la frecuencia de este tipo de acci- aorta y los vasos mayores se afectan más fre-
dentes, se ha incrementado el interés por la cuentemente en el trauma de tórax.
documentación sobre trauma civil.
El trauma cerrado se asocia con lesión vas-
cular en 5-10% de los casos.
ETIOLOGÍA, INCIDENCIA El 80% de los pacientes con ruptura aórtica
Y ANATOMÍA PATOLÓGICA fallece de inmediato. De los sobrevivientes,
30% muere dentro de las primeras seis horas
Las condiciones de vida en el mundo actual de ocurrido el evento traumático, 40% dentro
hacen que cada día las personas se expongan de las 24 horas, 70% dentro de la primera se-
más a mecanismos que atentan contra su in- mana y 90% en el curso de los primeros cua-
tegridad. El prevalente ambiente de guerra y tro meses.
de violencia social, propicia que sean las per-
sonas jóvenes las más llamadas a padecer El trauma vascular abdominal tiene una parti-
este tipo de trauma. cularidad. La ubicación retroperitoneal de los

296
CAPÍTULO XXVIII: MANEJO GENERAL DEL TRAUMA VASCULAR ABDOMINAL

troncos mayores en parte retarda sus conse- CLASIFICACIÓN DEL TRAUMA


cuencias catastróficas, pero también es cau-
sa de demora en el diagnóstico; puede origi-
VASCULAR ABDOMINAL, SEGÚN
nar una rápida hemorragia exanguinante en LA ORGAN INJURY SCALING
el espacio retroperitoneal, en las regiones
mesentérica y retrohepática, o un gran hema- GRADO DE LESIÓN
toma portal. I. Arteria mesentérica superior innominada o
ramas de la v. mesentérica superior.
Muchos pacientes con trauma vascular abdo- - Arteria mesentérica inferior o ramas de
minal se presentan en shock, y es poco el la v. mesentérica inferior.
tiempo disponible para el diagnóstico. - Arteria / vena frénica.
- Arteria / vena lumbar.
Los principales vasos sanguíneos que son - Arteria / vena gonadal.
afectados por el trauma son: - Arteria / vena ovárica.
- Otras pequeñas venas y arterias
1. Aorta abdominal y vena cava inferior. innominadas que ameritan ligadura.
2. Tronco celíaco.
3. Arteria y vena mesentérica superior. II. Arteria hepática común, derecha o
4. Arteria y venas renales. izquierda.
5. Arteria y venas ilíacas. - Arteria / vena esplénica.
6. Arteria hepática, vena porta y vena cava - Arterias gástricas derechas o izquierdas.
retrohepática. - Arteria gastroduodenal.
7. Arteria y venas lumbares. - Tronco de la arteria mesentérica infe-
8. Venas lumbares ascendentes. rior o tronco de la vena mesentérica in-
9. Ramas terminales de la arteria ilíaca ferior.
interna. - Ramas llamadas primarias de la arteria
10. Ramas de la arteria ilíaca externa. mesentérica o vena mesentérica.

Los traumas penetrantes pueden involucrar III. Tronco de la vena mesentérica superior.
varios vasos, pero con mayor frecuencia invo- - Vena/arteria renal.
lucran la vena cava. Un estudio de 10 años - Vena/arteria ilíaca.
de experiencia demostró que el mayor por- - Vena/arteria hipogástrica.
centaje de lesiones se localizó en la aorta - Vena cava infrarrenal.
abdominal, la vena cava inferior y la arteria y
vena ilíaca externa. IV. Tronco de la arteria mesentérica superior.
- Tronco celíaco.
Los daños vasculares abdominales general- - Vena cava suprarrenal o infrahepática.
mente se encuentran en combinación con le- - Aorta infrarrenal.
siones en zonas cercanas o en vísceras sóli-
das, y rara vez están aislados, lo que hace V. Vena Porta.
que estas lesiones tengan un alto potencial - Vena hepática extraparenquimatosa.
de mortalidad. - Vena cava retrohepática o suprahe-
pática.
- Aorta suprarrenal subdiafragmática.

297
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Se incrementa un grado para las lesiones gra- trombosis arterial; en general se prefiere
do III o IV que comprometen más de 50% de después de la tomografía o del ultrasoni-
la circunferencia y se disminuye un grado si do, y es considerada como el punto final
la laceración es menor del 25% de la circun- de la evaluación del trauma vascular.
ferencia para grados IV o V. • El ultrasonido abdominal tiene indicaciones
especiales. Puede identificar la presencia
Con base en esta clasificación, el trauma de líquido libre en la cavidad abdominal y
vascular abdominal se estima como un factor de lesiones de órganos sólidos como el hí-
de riesgo 5. gado y el bazo, pero es altamente opera-
dor-dependiente.
• La resonancia magnética no juega papel
ESQUEMA GENERAL DE MANEJO de importancia en la valoración del evento
agudo.
El trauma vascular abdominal se constituye • El Doppler abdominal no tiene indicación
en un verdadero reto de diagnóstico y de ma- en el evento agudo.
nejo para el cirujano.
Los estudios orientados a determinar el me-
Clínicamente los pacientes se observan con jor manejo del trauma vascular abdominal en
exanguinación, shock hipovolémico hemorrá- pacientes que sufren accidentes de tránsito
gico, acidosis y hematoma contenido con hipo- han mostrado que en condiciones estables,
tensión leve. Algunos presentan distensión la TAC con contraste y/o la angiografía preo-
abdominal o irritación peritoneal. peratoria son de gran utilidad para determi-
nar el daño y planear la cirugía.
Si la estabilidad hemodinámica lo permite, el
diagnóstico imagenológico se puede enfocar El lavado peritoneal es un indicador sensible
así: del trauma vascular abdominal, pero su poca
especificidad hace que en el evento crítico
• Radiografía simple de abdomen en búsque- donde es preciso localizar la lesión, su utili-
da de proyectiles. dad se vea disminuida.
• Tomografía axial computadorizada de ab-
domen (TAC) con contraste, la cual permi- En el manejo inicial del paciente se deben apli-
te un mejor punto de referencia para el car los parámetros del ATLS del Colegio Ame-
abordaje quirúrgico. ricano de Cirujanos.
• Dependiendo de la situación, algunas se-
ries han mostrado utilidad de pielografía El uso de líquidos endovenosos debe ser cui-
endovenosa, aunque la TAC es más sen- dadoso, a fin de evitar los resangrados con la
sible en la detección de las lesiones rena- restauración de normotensión.
les postraumáticas y actualmente es el
método diagnóstico de elección. El uso de vasopresores está contraindicado,
• La arteriografía es el método más sensible ya que éstos facilitan el sangrado secundario
y específico en la valoración del trauma y tienen otros efectos indeseables.
vascular. Algunas series reportan sensibi-
lidad de 98,3% y especificidad de 98,5%. Si el paciente presenta un claro deterioro he-
Puede ser útil en fracturas de pelvis con modinámico con shock, debe ser llevado de
sangrado o como método diagnóstico de inmediato a laparotomía exploratoria.

298
CAPÍTULO XXVIII: MANEJO GENERAL DEL TRAUMA VASCULAR ABDOMINAL

El abordaje quirúrgico depende del sector vas- La eficacia de la embolización en el control


cular afectado. Las lesiones del sector visceral de la hemorragia pélvica ha sido demostrada,
son altamente letales (>80%), por la dificultad y es frecuente ver cómo se ha incorporado la
de acceder en forma expedita a ellas. Se re- embolización en los algoritmos de manejo.
quiere una movilización visceral extensa para
lograr el control de la aorta/cava en esta región.
TRAUMA DE AORTA ABDOMINAL
El ideal es llevar a cabo la reparación vascular
primaria. En las lesiones venosas, la ligadura Generalmente se presenta como un hemato-
puede ser bien tolerada, especialmente en las ma central retroperitoneal o como una hemo-
del sector iliaco. En el territorio arterial, las rragia intraperitoneal masiva.
alternativas son diversas, siendo siempre el
principio fundamental la reconstrucción pre- La supervivencia en las lesiones de aorta se
coz con material autólogo. ha informado así:

Durante la exploración quirúrgica es importan- • Aorta suprarrenal 35,8%.


te administrar un adecuado volumen de líqui- • Aorta infrarrenal 45,3%
dos endovenosos. Se debe diagnosticar la ubi-
cación del hematoma, en cualquiera de las tres Para la reparación se expone la aorta por me-
zonas, para definir la conducta quirúrgica. dio de la maniobra de rotación visceral (ma-
niobra de Mattox), por la maniobra de Super-
Se deben tener en mente las maniobras bási- kocher o por la vía transmesocólica, abordajes
cas para los abordajes vasculares: que permiten disecar la aorta entre los dos
pilares del diafragma, controlar el sangrado
• Maniobra de Mattox (abordaje izquierdo de con pinzamiento (“clampeo”) por debajo de las
la aorta suprarrenal y de la mesentérica). arterias renales, el cual no debe pasar de 30
• Maniobra de kocher ampliada (expone la minutos. Si se requiere pinzar por encima de
cava infrahepática, los vasos iliacos y la las arterias renales para controlar el sangrado,
aorta infrarrenal). es necesario realizar derivación de flujo a los
• Vía transmesocólica en lesiones de la aorta riñones.
infarrenal.
En algunos casos se requiere toracotomía de
Alternativamente se puede llevar a cabo un resucitación con pinzamiento de la aorta torá-
control proximal de la aorta mediante toraco- cica descendente.
tomía izquierda con pinzamiento (“clampeo”)
de la aorta torácica. Los daños menores de la aorta pueden ser
reparados primariamente con monofilamento
La laparotomía exploratoria en sala de emer- de sutura no absorbible. Los grandes daños
gencias permite salvar un 2-3% de los pacien- pueden requerir aortoplastia con parche y los
tes con trauma vascular abdominal grave que daños más extensos se reparan con prótesis.
llegan en estado moribundo.
Cuando se presente lesión intestinal asocia-
Un método todavía no muy usado, es la ciru- da, las prótesis corren riesgo de infectarse,
gía endovascular, la cual tiene un futuro promi- por lo cual el retroperitoneo debe ser irrigado
sorio en casos seleccionados. copiosamente con antibiótico.

299
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRAUMA DE VASOS ILÍACOS La tasa de mortalidad en lesiones de la arte-


ria mesentérica superior es cercana a 70%.
La mayoría de las lesiones de los vasos ilíacos
resulta de trauma penetrante. La tasa de su- La aproximación al tronco celíaco se realiza a
pervivencia es del orden de 60% ó más. través del ligamento gastrohepático y el liga-
mento gastrocólico, con retracción superior del
Los signos físicos de lesión ilíaca incluyen la estómago o mediante la maniobra de rotación
disminución de los pulsos femorales. Los pa- visceral.
cientes se presentan con sangrado pélvico
activo o con hematoma retroperitoneal sobre Se debe intentar el cierre primario de estas
el aspecto lateral de la pelvis. lesiones. Si no es posible, se puede ligar el
tronco celíaco, lo cual es bien tolerado gra-
El manejo quirúrgico requiere exponer el vaso cias a la circulación colateral de la arteria me-
desde la aorta distal, llevando la disección sentérica superior a través de la arteria gastro-
hasta la ilíaca común. Si es necesario se debe duodenal. Es necesario revisar la perfusión
retraer y reparar el sigmoide o el ciego. hepática para determinar si requiere la colo-
cación de un injerto desde la aorta.
La reparación de los vasos iliacos comunes o
de la arteria ilíaca externa se realiza por re- Si el daño se produce sobre la arteria mesen-
paración lateral, excisión del área de necrosis térica superior, se deben levantar todas las
y anastomosis termino-terminal. Si hay gran vísceras, desde el lado derecho del abdomen,
contaminación enteral, la arteria ilíaca debe con separación del duodeno y del colon trans-
ser ligada y se coloca un bypass. Si la arteria verso, hasta el proceso uncinado del pán-
ilíaca interna se ve afectada, se puede ligar y creas. En ocasiones se hace necesario prac-
su flujo es bien suplido por colaterales. ticar pancreatectomía distal.

Las fracturas de pelvis pueden llevar asocia- La sutura se realiza con material no absorbible
do daño en múltiples ramas de la arteria y de en forma término-terminal, y en algunas oca-
la vena ilíaca interna. Esto ocasiona gran he- siones con parche de safena o de material sin-
morragia pélvica que puede permanecer ocul- tético.
ta. Los pacientes responden en su mayoría a
la estabilización con fijador externo. Si intra- Se puede hacer la ligadura proximal si el caso
operatoriamente se descubre un hematoma extremo lo requiere, pero llevando a cabo pos-
pélvico no expansivo, no debe explorarse. Si terior revascularización o, de lo contrario, re-
es expansivo, se debe empaquetar la pelvis, sultará en inminente riesgo de isquemia
cerrar el abdomen y llevar el paciente a angio- mesentérica.
grafía con embolización.
Debe evaluarse la integridad intestinal a fin
de establecer la necesidad de resección. Es
TRAUMA DE VASOS MESENTÉRICOS necesario realizar angiografía a las seis ho-
Y TRONCO CELÍACO ras de la intervención, o una segunda mirada
para establecer la presencia de isquemia.
Las lesiones de las ramas viscerales de la aorta
generalmente se asocian con lesión concomi-
tante visceral hepática o del intestino delgado.

300
CAPÍTULO XXVIII: MANEJO GENERAL DEL TRAUMA VASCULAR ABDOMINAL

TRAUMA DE VASOS RENALES existen colaterales. La vena renal izquierda


puede ser ligada proximalmente, siempre y
Las lesiones de los vasos renales pueden ser cuando se preserven las colaterales de la go-
ocasionadas por trauma cerrado o penetran- nadal y la adrenal. El riñón derecho no tolera
te. En algunas situaciones se puede generar la ligadura de la vena, por lo cual ésta debe
trombosis de la arteria renal por movimientos ser reparada, o proceder con nefrectomía. La
rápidos de aceleración o desaceleración den- vena yugular interna puede ser usada para
tro del retroperitoneo, lo cual ocasiona estre- las reparaciones.
chamiento de los vasos, fractura de la íntima
y disrupción arterial. Si las condiciones son muy adversas y el re-
paro vascular se hace difícil, se puede practi-
Los signos clínicos incluyen dolor en epigas- car la extirpación renal, enfriar el riñón con
trio y flanco y hematuria macroscópica. La solución de Ross, corregir las lesiones y auto-
hematuria puede estar ausente en 20% de los transplantar el órgano.
casos. La presencia de oliguria o de anuria
indica daño arterial bilateral. Se debe recordar que el riñón tolera un tiem-
po de isquemia que oscila entre las dos y las
En la exploración operatoria son signos indi- cuatro horas, aunque algunas series reportan
cativos de trauma vascular renal la presencia retorno de la función después de seis horas
de hematoma retroperitoneal lateral o central de isquemia.
y la apariencia cianótica del riñón.
La nefrectomía se reserva para pacientes en
El daño vascular renal frecuentemente termi- malas condiciones generales, con heridas en
na en nefrectomía, para lo cual es indispen- múltiples órganos y gran contaminación.
sable hacer una valoración adecuada de la
función renal. Se deben palpar intraoperato-
riamente ambos riñones. TRAUMA DE VENA CAVA
El manejo quirúrgico requiere la exploración La hemorragia ocurre generalmente en el mo-
amplia del espacio retroperitoneal. En lesio- mento de la exploración. La reparación late-
nes arteriales unilaterales, es necesario de- ral primaria se puede llevar a cabo en 50% de
terminar la necesidad de sutura lateral o de los casos, utilizando material no absorbible.
resección del área del daño con anastomosis
término-terminal, pero la mayoría requiere in- Las lesiones menores de 50% de la luz son
jerto de vena safena. reparadas con sutura individual, mientras las
lesiones mayores de 50% requieren parche
El abordaje de la lesión de la arteria renal dere- venoso o parche con peritoneo. Para la repa-
cha se hace levantando todo el colon derecho. ración se puede utilizar vena safena, yugular
En el lado izquierdo se repara la aorta y se interna o externa.
controla la hemorragia antes de revisar el
riñón. Las lesiones de la pared posterior de la vena
cava implican mayor dificultad en su repara-
Las lesiones de las venas renales deben ser ción; se deben reparar desde la parte anterior
reparadas por sutura lateral, si es posible. Se con sutura intraluminal, o haciendo una rota-
pueden ligar las venas segmentales, ya que ción con exposición de la pared anterior.

301
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Después de la reparación de la vena, se debe LECTURAS RECOMENDADAS


colocar compresión elástica en los miembros
inferiores, a fin de evitar el edema y promover 1. Anderson CA, Sawwyer MA, Demaioribus CA, et
el retorno venoso. al. Seromuscular enteric pedicles and prosthetic
aortic graft complications in a porcine abdominal
trauma model. An experimental study. Dig Surg
Las lesiones de la cava retrohepática y de las 2000; 17:126-131.
venas hepáticas constituyen los mayores re- 2. Asensio JA, Forno W, Roldan G,et al. Visceral vas-
tos en el campo de las lesiones vasculares. cular injuries. Surg Clin North Am 2002; 82:1-20.
3. Asensio JA, Soto SN, Forno W, et al. Abdominal
Es necesaria la rotación hepática para expo- vascular injuries: the trauma surgeon’s challenge.
ner el área de lesión. En ocasiones se hace Surg Clin North Am 2001; 81:1395-1416.
necesaria la desvascularización hepática, a 4. Callow A, Ernst C. Vascular Surgery: theory and prac-
tice. 1 th Edition. Appleton & Lange. New York, 1995.
través de un shunt cavo-atrial.
5. Davis TP, Feliciano DV, Rozycki GS, et al. Results
with abdominal vascular trauma in the modern era.
La exclusión cava retrohepática es otro proce- Am Surg 2001; 67:565-571.
dimiento útil en este tipo de trauma. Se practi- 6. Feliciano DV. Management of traumatic retrope-
ca toracofrenolaparotomía, maniobra de Prin- ritoneal hematoma. Ann Surg 1990; 211:109-123.
gle (pinzamiento del hilio hepático), coloca- 7. Hallett JW Jr. Management of abdominal aortic
ción de sonda de Foley en la auriculilla dere- aneurysms. Mayo Clin Proc 2000; 75:395-399.
cha para infusión de líquidos a chorro. Se pin- 8. Lefering R, Zart M, Neugebauer E. Retrospective
evaluation of the simplified Therapeutic Scoring
za la cava a nivel intrapericárdico. Se hace
System (TISS-28) in a surgical intensive care unit.
disección y reparo de lesiones de cava me- Intesive Care Med 2000; 26:1794-1802.
diante luxación hepática a la izquierda. 9. Martínez G, Restrepo J. Trauma de Vasos Abdo-
minales. Hospital Universitario San Vicente de
Paúl, Medellín. Colombia.
TRAUMA DE VENA PORTA 10. Nagy K, Rodman G, Fulda G, et al. Guidelines for
the diagnosis and management of blunt aortic
injury: an EAST Practice Management Guidelines
La lesión de la vena porta debe ser reparada,
Work Group. J Trauma 2000; 48:1128-1143.
de ser posible, con sutura primaria no absorbi- 11. Pagan M, Bettmann MA, American College of
ble. Se requiere practicar maniobra de Kocher Radiology, et al. Appropiateness Critera for blunt
(rotación del duodeno y de la cabeza del pán- abdominal or pelvic trauma suspected vascular
creas medialmente), lo cual permite pinzar la injury. Radiology 2000; 215:41-47.
vena porta y la vena mesentérica superior. Sin 12. Valdés F, Mertens R. Trauma Vascular. Pontificia
embargo, en las fases agudas esto puede Universidad Católica de Chile, Departamento de
generar isquemia mesentérica por hiperten- enfermedades Cardiovasculares. www.escuela.
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13. Yasuhara H, Naka S, Kuroda T, Wada N. Blunt
thoracic and abdominal vascular trauma and organ
injury caused by road traffic accident. Eur J Vasc
Endovasc Surg 2000; 20:517-522.

302
CAPÍTULO XXIX: TRAUMA VASCULAR TORÁCICO MAYOR

CAPÍTULO XXIX

Trauma vascular torácico mayor

Juan Carlos Reyes, MD


Departamento de Cirugía,
Fundación Sante Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA
Y FISIOPATOLOGÍA

L a lesión de los grandes vasos torácicos


es más frecuente en la población civil. Co-
rresponde al 8-10% del total de las lesiones
arteria subclavia y la aorta descendente, con
una frecuencia de 21% cada una, seguidas
por la arteria pulmonar, con 16%, la vena sub-
vasculares que se ven en los centros de aten- clavia con 13%, la vena cava inferior intrato-
ción de trauma de los Estados Unidos. De este rácica con 11%, y la arteria innominada con
10%, hasta 90% son secundarias a traumatis- 9%, igual que las venas pulmonares.
mos penetrantes, y el resto son debidas a trau-
ma cerrado. En 1993, Pate & col. reportaron una supervi-
vencia de 71% en los pacientes que lograban
Rich et al. revisaron el trauma de grandes va- llegar vivos a un centro de atención de trauma,
sos en Vietnam en 1970, y encontraron que 3 y consideró que los buenos resultados se de-
de cada 1.000 lesiones eran de grandes va- bían a dos causas principales: el gran progre-
sos. Greendyke informó en 1966 que hasta so alcanzado en el manejo prehospitalario de
16% de las víctimas de accidentes automovi- los pacientes traumatizados y el entrenamien-
lísticos fatales tenían rupturas traumáticas de to específico en cirugía de trauma y cuidado
la aorta, que correspondía a la causa directa crítico del personal que atiende los centros
de muerte en 5% de los fallecidos. Un estudio especializados de trauma, junto con el equipa-
epidemiológico más reciente realizado por miento óptimo para la atención de pacientes
Williams y col. en 1994 en el condado Erie del de alta complejidad.
estado de Nueva York, confirmó la presencia
de trauma aórtico en 20% de los pacientes Los vasos que se lesionan más frecuentemen-
fallecidos en accidentes de tránsito; 99% de te en el trauma cerrado, son la arteria innomi-
las muertes ocurren durante las primeras 24 nada, las venas pulmonares, las venas cavas
horas del accidente. y, la más frecuente de todas, la aorta descen-
dente. Hasta en 65% de los casos, el segmen-
Estudios por Mattox y Feliciano (Mattox et al to aórtico comprometido es el proximal de la
1989) revelaron que hasta un tercio de los pa- aorta descendente, que se asocia con una
cientes que son llevados a toracotomía por tasa de mortalidad de 85%. También se pue-
trauma cerrado o penetrante, tienen lesión de den involucrar el cayado o la aorta descen-
los grandes vasos. Los vasos intratorácicos dente, hasta en 14% de los casos, y múltiples
que se lesionan con mayor frecuencia son la sitios de la aorta hasta en 18% de los casos;

303
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

en tal condición la mortalidad puede ser aún trauma de los grandes vasos torácicos. Los
mayor. pacientes con trauma penetrante casi siem-
pre presentan inestabilidad hemodinámica, co-
Los vasos que tienen un punto fijo en sus tra- mo consecuencia de hemorragia masiva hacia
yectos son los más susceptibles de sufrimiento una de las cavidades pleurales o hacia el me-
en el trauma cerrado; los ejemplos más impor- diastino. En los casos en que la lesión pene-
tantes son las venas pulmonares, las venas trante está localizada por dentro del pericar-
cavas y la aorta descendente a nivel del liga- dio, puede haber taponamiento cardíaco. Es-
mento arterioso y del diafragma. Algunos tos pacientes son llevados a la sala de cirugía
vasos como la arteria innominada y el arco de manera rápida, y es durante la operación
aórtico pueden lesionarse por mecanismos cuando usualmente se hace el diagnóstico de
compresivos entre el esternón y la columna lesión de grandes vasos. Por el contrario, los
vertebral. A pesar de que siempre se consideró pacientes con trauma cerrado que no fallecen
que el mecanismo traumático que se asocia en el sitio del accidente ni durante su traslado,
más frecuentemente con lesiones cerradas de generalmente ingresan al servicio de urgen-
la aorta es el de desaceleración rápida al es- cias en estado hemodinámico normal y su le-
trellarse el vehículo de frente, en el estudio sión puede pasar inadvertida durante la eva-
de Williams y col. se encontró que hasta en luación inicial.
50% de los casos se pueden ver estas lesio-
nes en los accidentes con impactos laterales. En las víctimas de trauma penetrante, hay al-
El sitio que más se lesiona en todos los estu- gunos elementos que se deben detallar en la
dios de trauma cerrado es el istmo aórtico, el historia clínica, tales como la longitud del arma
cual se ve comprometido hasta en 85% de o el calibre y el número de disparos realizados,
los pacientes. la distancia a la cual se encontraba la persona
al recibir el impacto, los antecedentes de heri-
En cuanto al trauma penetrante, las heridas das previas y otros datos que los acompañan-
por arma cortopunzante y por proyectil de ar- tes puedan aportar sobre el evento. En los ca-
ma de fuego siguen siendo la causa más fre- sos de trauma cerrado, la información sobre
cuente de lesiones de aorta y grandes vasos. el accidente y el mecanismo del trauma es de
La mayoría ocurre en los trayectos extraperi- gran importancia. Algunos de los datos peren-
cárdicos, por lo cual las hemorragias masivas torios de registrar son: la severidad de la desa-
a la cavidad pleural (principalmente la izquier- celeración (altura de la caída o velocidad del
da) y al mediastino, son una constante que se automóvil), la magnitud de la transferencia de
asocia con una mortalidad significativa. En energía (estado del vehículo), posición del pa-
algunas ocasiones se pueden encontrar pseu- ciente en el automóvil, uso de cinturones de
doaneurismas y fístulas arterio-venosas, aor- seguridad o de “airbags”, la distancia de ex-
to-pulmonares, o inclusive, aorto-cardíacas. pulsión desde el vehículo. El personal de aten-
ción prehospitalaria también puede suminis-
trar información importante sobre la escena
ASPECTOS CLÍNICOS del accidente, como el volumen del sangrado,
el estado hemodinámico y neurológico durante
En general se deben tener en cuenta algunas el transporte, los volúmenes de cristaloides
generalidades en el momento de afrontar el infundidos, entre otras.

304
CAPÍTULO XXIX: TRAUMA VASCULAR TORÁCICO MAYOR

MANEJO INICIAL trayectoria que así lo sugiera. El diagnóstico


se logra con el paso rápido de un tubo de tora-
Una vez ingresa el paciente al servicio de ur- costomía en el lado afectado. Si se obtiene
gencias o de trauma, debe ser examinado si- sangre rutilante que fluye en cantidad conside-
guiendo las guías de atención del ATLS del rable, se obtiene parte de la sangre por medio
American College of Surgeons. Se deben te- de equipo de autotransfusión y se procede a
ner en cuenta los hallazgos clínicos que se realizar inmediatamente la toracotomía. No
relacionen con trauma de grandes vasos torá- hay que olvidar que obtener una cantidad im-
cicos: hipotensión, hipertensión en los miem- portante de sangre implica obliterar el tubo
bros superiores, asimetría en los pulsos y en para evitar que el paciente se exsanguine a
las presiones arteriales en las extremidades, través del mismo.
signos externos de trauma torácico severo (por
ejemplo, huella del volante en el pecho), he- Una ayuda diagnóstica importante en la eva-
matoma en expansión en el opérculo torácico, luación inicial de los pacientes hemodinámica-
murmullo interescapular, fracturas palpables mente estables es la radiografía de tórax. En
de la columna torácica, del esternón o de la ocasiones puede dar información suficiente
escápula. para solicitar una angiografía desde el princi-
pio, e inclusive para llevar al paciente a salas
Cuando se sospechan lesiones de los grandes de cirugía. Algunos de los hallazgos radiográ-
vasos y al parecer el sangrado está ausente, ficos que sugieren lesión de grandes vasos
se debe tener precaución con el manejo de en trauma penetrante son: hemotórax, trayec-
los líquidos administrados, ya que al aumentar torias confusas, proyectiles u otros cuerpos
la presión arterial se puede remover el coágulo extraños en proximidad de los grandes vasos,
que controló la hemorragia, o se puede rom- proyectiles “perdidos” en un paciente con he-
per la adventicia que contenía el sangrado. rida torácica de entrada sin salida (puede su-
Este concepto de hipotensión moderada con- gerir embolización distal). En el trauma cerra-
trolada es similar al que se maneja en pacien- do se han descrito múltiples hallazgos radio-
tes con aneurismas rotos de aorta o con tapo- gráficos que se correlacionan con lesión de
namiento cardíaco, en quienes se prefiere los grandes vasos mediastinales, por ejemplo
mantener una presión arterial sistólica entre pérdida del contorno del bulbo aórtico, ensan-
70 y 90 mmHg. Si el paciente ingresa hipoten- chamiento mediastinal superior con desviación
so, con signos externos importantes de san- de la tráquea hacia la izquierda (lesión de ar-
grado, y el mecanismo del trauma fue pene- teria innominada), fracturas esternales, esca-
trante, no se debe esperar mucho tiempo para pulares, costales múltiples, ensanchamiento
lograr una fase inicial de reanimación en la mediastinal total de más de 8 cm, depresión
sala de urgencia, sino trasladar al paciente a del bronquio fuente izquierdo, pérdida de una
salas de cirugía para toracotomía y explora- banda pleural paravertebral, desviación de la
ción del sangrado. sonda nasogástrica, desplazamiento lateral o
anterior de la tráquea, pérdida de la ventana
Si el paciente tiene heridas múltiples que com- aorto-pulmonar, capuchón aórtico, hematoma
prometen diferentes segmentos corporales y apical pleural, lesión cerrada del diafragma.
se encuentra en shock, se debe descartar que Sin embargo, en casos de suma urgencia, el
la hemorragia principal provenga de los gran- paciente debe ser intervenido de inmediato, y
des vasos torácicos hacia las cavidades pleu- el ordenar una radiografía de tórax puede sig-
rales, cuando los proyectiles han tenido una nificar una demora fatal.

305
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Un elemento muy importante dentro del mane- MANEJO DEFINITIVO


jo inicial del trauma torácico vascular (y torá-
cico en general) es la toracostomía conecta- El manejo definitivo puede variar desde el con-
da a drenaje cerrado. Si al pasar el tubo de servador (no quirúrgico) hasta el uso de
toracostomía se obtienen 1.500 mL de san- bypass cardiopulmonar, según la localización
gre, o si el drenaje es de 200 mL/hora por 4 y la magnitud del trauma. El manejo conserva-
horas o más, el paciente debe ser llevado a dor está indicado en aquellos pacientes en que
toracotomía para descartar lesión de grandes no se presume un beneficio importante de lle-
vasos. varlos a cirugía de manera inmediata; en tal
situación se procede a estabilizar u optimizar
Otros estudios diagnósticos de importancia las condiciones fisiológicas del paciente para
son la tomografía axial computadorizada ir a cirugía posteriormente.
(TAC) y la angiografía por imágenes de reso-
nancia magnética (angioRM). La primera se La cirugía endovascular ha tomado un gran
reserva para pacientes hemodinámicamente impulso en la actualidad y se ha indicado en
estables, con indicación de TAC de otras regio- pacientes con lesiones múltiples y severas que
nes, por ejemplo cráneo, con mecanismos de impiden que el paciente pueda tolerar un pro-
trauma sugestivos, y con mediastino normal cedimiento quirúrgico mayor. Aun no hay es-
en la radiografía simple. El uso de la TAC heli- tudios que reporten beneficios claros ni efec-
coidal (que es de rápida ejecución) y la posi- tividad terapéutica con estos métodos utiliza-
bilidad de realizar reconstrucción tridimensio- dos de manera rutinaria.
nal de la anatomía vascular es un avance no-
torio. La angioRM aporta imágenes de muy La arteriografía se utiliza en pacientes hemodi-
alta resolución, pero su limitación mayor es lo námicamente estables. Sigue siendo el estu-
dispendiosa y costosa que resulta, más aun dio considerado como el patrón oro en la eva-
en pacientes inestables. luación de pacientes con trauma torácico con
sospecha de lesión de grandes vasos.
El ecocardiograma transesofágico (ETE) ofre-
ce ventajas muy importantes sobre los demás La cirugía de urgencia está indicada cuando
estudios mencionados en pacientes con trau- hay inestabilidad hemodinámica, cuando hay
ma cerrado o con complicaciones post-trau- altos volúmenes de drenaje por el tubo de tó-
máticas como pseudo-aneurismas o fístulas; rax, o cuando hay evidencia radiológica de ex-
no requiere medios de contraste, evalúa de pansión de un hematoma mediastinal. En to-
manera simultánea la función ventricular y val- dos los casos se deben explicar a los familia-
vular, se puede realizar y repetir en cualquier res los riesgos de mortalidad o de lesiones
lugar. En 1997 Ben Menachem reportó sensi- neurológicas cerebrales o espinales. De
bilidad y especificidad de 85,7% y 92%, res- acuerdo con la presunción diagnóstica de la
pectivamente, comparadas con 89% y 100% lesión, las incisiones pueden ir desde una es-
para la aortografía. La mayor limitante del ETE ternotomía mediana hasta una incisión en “li-
es que requiere personal muy entrenado para bro abierto”. Cuando no se tiene una lesión
realizar e interpretar el estudio de manera clara en mente, la incisión rutinaria (como la
confiable. incisión mediana en trauma abdominal) debe
ser una toracotomía anterolateral izquierda.
Si el paciente está hemodinámicamente es-
table, la arteriografía puede definir el abordaje.

306
CAPÍTULO XXIX: TRAUMA VASCULAR TORÁCICO MAYOR

Un importante concepto que se debe tener en 3. Mattox KL, Feliciano DV, Beall AC. Five thousand
cuenta es el de la cirugía de control de daños, seven hundred sixty cardiovascular injuries in 4459
la cual tiene dos abordajes diferentes. El prime- patiens. Epidemiologic evolution 1958 1987. Ann
Surg 1989; 209:698-705.
ro trata de enfocarse sobre el manejo definiti-
4. Mattox KL, Feliciano DV, Moore EE. Trauma. Cuar-
vo de las lesiones, pero con técnicas más sim- ta edición. McGraw-Hill Interamerican. México,
ples y rápidas, como el uso de suturas mecá- 2001.
nicas y las resecciones que se puedan realizar 5. Mattox KL. Red River Anthology. J Trauma 1997;
más rápidamente (por ejemplo neumonectomía 42:353-368.
para lesiones del hilio pulmonar), y el segundo 6. Pate JW, Cole FH, Walker WA, Fabian TC.
intenta restablecer las condiciones fisiológicas Penetrating injuries of the aortic arch and its
del paciente de manera inicial, para programar branches. Ann Thorac Surg 1993; 55:586-592.
7. Pezzella TA, Silva WE, Lancey RA. Cardiothoracic
una segunda intervención para realizar las re-
trauma. Curr Prob Surg 1998; 35:762-770.
paraciones definitivas de las lesiones. 8. Rich NM, Spencer FC. Injuries of the intrathoracic
branches of the aorta arch. En Vascular Trauma.
Editado por NM Rich, FC Spencer. WB Saunders.
LECTURAS RECOMENDADAS Phladelhia, 1978.
9. Wall MJ, Hirshberg A, LeMaire SA, Holcomb J,
1. Greendyke RM. Traumatic rupture of the aorta. Mattox KL. Thoracic aortic and thoracic vascular
Special reference to automobile accidents. JAMA injuries. Surg Clin North Am 2001; 81:1375-1393.
1966; 195:527-530. 10. Williams JS, Graff JA, Uku JM, Steinig JP. Aortic
2. Ivatury R, Cayten C. The Textbook of Penetrating Injury in vehicular trauma. Ann Thorac Surg 1994;
Trauma. Williams & Wilkins. Philadelphia, 1996. 57:726-730.

307
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXX

Trauma vascular periférico

Fernando Guzmán Mora, MD


Jefe Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

ETIOLOGÍA, INCIDENCIA
Y ANATOMÍA PATOLÓGICA

L as lesiones militares ocurren casi exclusi-


vamente en adultos jóvenes, libres de en-
fermedad arterial crónica, y con lesiones por
Las lesiones iatrogénicas, especialmente lue-
go de procedimientos de cateterismo, ocurren
en un porcentaje cercano a 1%.
misiles de alta velocidad, que ocasionan des-
trucción masiva de tejidos blandos y, por ende, El trauma cerrado ofrece importancia por aso-
de la circulación colateral. Las lesiones civiles ciarse a fracturas y destrucción de tejidos blan-
son igualmente mas frecuentes en hombres dos, particularmente en casos de accidentes
jóvenes, pueden ocurrir en cualquier grupo de automovilísticos e industriales.
edad y aun en pacientes con arteriosclerosis
luego de procedimientos diagnósticos invasi- Las lesiones vasculares pueden clasificarse
vos como angiografía o cateterismo cardiaco. en varios grupos:

Usualmente el trauma civil esta producido por Laceración. Varía de la simple lesión por pun-
misiles de baja velocidad, con poca lesión de ción a la sección completa de la pared arterial.
tejidos blandos y por trauma cerrado secun-
dario a accidentes automovilísticos. Contusión. Puede presentarse como hema-
toma a nivel de la adventicia, fragmentación
Aproximadamente 80% de las lesiones arte- difusa de la pared arterial y, en su forma mas
riales ocurren en las extremidades, 4% en el severa, como fractura de la intima con pro-
cuello y el resto en tórax y abdomen. lapso intraluminal con trombosis posterior.

Las lesiones arteriales mas frecuentes ocurren Espasmo. Puede ocurrir como una entidad
en las arterias femorales superficiales, hume- aislada. En principio nunca debe atribuirse la
rales y poplíteas. ausencia de pulsos o la isquemia de una extre-
midad a espasmo únicamente, siendo obliga-
En la práctica militar 60% de los traumas son torio descartar la obstrucción del vaso por
causados por fragmentos metálicos, 35% por cualquier otra causa.
proyectiles. El trauma cerrado o por aplasta-
miento ocurre tan sólo en 1% de los casos. Fístula arteriovenosa: Ocurre cuando hay
lesión concomitante de la arteria y la vena.

308
CAPÍTULO XXX: TRAUMA VASCULAR PERIFÉRICO

Falsos aneurismas: Parten de laceraciones Cuando la función neurológica se encuentra


de una arteria que son selladas parcialmente intacta virtualmente no existe riesgo de gan-
por coágulos. Posteriormente el trombo sufre grena. En cambio, cuando la alteración de la
licuefacción y la lesión comienza a expandirse. función nerviosa se altera sin lesión directa
del tronco nervioso, la aparición de isquemia
irreversible es muy alta, a menos que se res-
EVALUACIÓN CLÍNICA tituya la circulación de inmediato.

En la mayoría de los pacientes la historia o el En pacientes mayores de 50-60 años debe


examen clínico indican o descartan la presen- buscarse historia de claudicación y efectuar
cia de lesiones vasculares. Debe, sin embargo, una evaluación comparativa con la extremi-
mantenerse un alto índice de sospecha en caso dad sana.
de cualquier herida penetrante que pase cerca
de cualquier arteria mayor y considerarse el Cuando los pulsos se encuentran presentes
uso de la arteriografía o practicar la exploración la posibilidad de pasar por alto una lesión arte-
quirúrgica inmediata de acuerdo con el caso. rial es alta, pues desde hace tiempo se sabe
que el porcentaje de pacientes con lesión arte-
Debe darse especial interés al tiempo de evo- rial seria y pulsos distales presentes varía de
lución, la cantidad y características del sangra- 10-33%.
do, la presencia de shock y la cantidad de lí-
quidos necesarios para la resucitación. La exploración rutinaria de las heridas pene-
trantes cercanas a grandes vasos ha sido in-
Las lesiones arteriales se encuentran frecuen- dicada en algunos centros, por considerar
temente asociadas a otros tipos de trauma la arteriografía costosa e inexacta. Los resulta-
mayor, lo que dificulta su evaluación, particu- dos positivos de la exploración varían entre
larmente en casos de shock asociado, lo cual 36-61%, con una baja morbimortalidad. La
ocurre en 40-60% de los pacientes. exploración es altamente sensible en lesiones
iatrogénicas. En las heridas penetrantes solo
Es frecuente la asociación de trauma vascular alcanza 35% de positividad.
con lesiones en nervios y huesos, siendo mas
frecuentes en el área axilar y poplítea. Si se asocia la exploración con la arteriografía
preoperatoria aumenta la agudeza diagnósti-
Varios signos característicos se desarrollan en ca, disminuyendo las exploraciones negativas
una extremidad luego de interrumpirse la cir- a menos de 5%.
culación arterial. Los más importantes son:
La exploración quirúrgica esta además indica-
• Ausencia de pulsos periféricos. da en pacientes con falla renal, alergia al me-
• Palidez. dio de contraste o en casos en los cuales el
• Dolor (Pain). paciente debe ser llevado a cirugía con el objeto
• Parestesias o anestesia. de lavar fracturas o desbridar tejidos blandos.
• Parálisis.
Las radiografías simples de la zona afectada
Los signos más significativos son los de tipo deben tomarse siempre en dos planos para
neurológico (parestesias, parálisis) debido a detectar fracturas y cuerpos extraños.
la sensibilidad del tejido nervioso a la anoxia.

309
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Como se ha mencionado, la presencia de pul- MANEJO DE LAS LESIONES


sos distales luego de lesiones arteriales no ARTERIALES AGUDAS
es infrecuente. En 50% de los pacientes con
sección completa de arterias radial o cubital CONTROLAR LA HEMORRAGIA
se pueden encontrar pulsos distales. La per-
fusión se debe entonces confirmar por medio La hemorragia, en la mayoría de las circuns-
de arteriografía o estudios con Doppler, que tancias puede detenerse con la simple com-
demuestran que el pulso proviene de colate- presión digital, por medio de gasas y compre-
rales distales a través del arco palmar. sas. No se recomienda el uso de torniquetes

La innovación más reciente en estudios no RECUPERAR EL ESTADO CIRCULATORIO


invasivos es el Dúplex Scanning.
Deben utilizarse las medidas protocolarias de
Las indicaciones de arteriografía en trauma resucitación. Es necesario enfatizar en la uti-
vascular son: lización de cristaloides, la medición de pará-
metros hemodinámicos y el seguimiento con-
1. Pacientes hemodinámicamente estables, tinuo de los pacientes.
con signos equívocos de lesión arterial.
(Hematomas no pulsátiles, herida cercana Una vez estabilizado el paciente se deben ini-
a un vaso mayor, ausencia de pulso distal ciar antibióticos terapéuticos de tipo cefalos-
sin otros signos de isquemia, historia du- porina o, en su defecto, la asociación de pe-
dosa de sangrado arterial). nicilina con un aminoglucosido, de acuerdo al
2. Heridas secundarias a trauma cerrado. compromiso de la función renal.
3. Heridas secundarias a proyectiles múltiples.
4. Heridas por proyectiles paralelas a un vaso MINIMIZAR EL TIEMPO DE ISQUEMIA
mayor.
5. Sospecha de fístula arteriovenosa o pseu- El reparo arterial debe intentarse en toda cir-
doaneurisma. cunstancia a menos que se presente signos
6. Heridas en cuello o tórax de localización obvios de isquemia irreversible. Las primeras
dudosa. seis a ocho horas de isquemia constituyen el
7. Trauma cerrado de tórax con fracturas de “tiempo de oro” para el reparo arterial.
primer arco costal y ensanchamiento me-
diastinal.
MANEJO QUIRÚRGICO
En pacientes con signos definitivos de lesión En general, los pasos obligados en la cirugía
arterial la arteriografía puede considerarse “su- son:
perflua” y solamente se encuentra indicada si
el sitio aproximado de la lesión no se puede 1. Lavar y aislar ambos miembros inferiores
definir. o el superior y uno inferior por la posibili-
dad de injertos venosos.
La arteriografía en manos expertas constituye 2. Practicar una incisión lo suficientemente
un método diagnóstico seguro y confiable, con amplia como para permitir el control pro-
unos índices de especificidad y sensibilidad en ximal y distal del vaso.
trauma penetrante de 97% y 90% y con cifras 3. Heparinizar el cabo proximal, previa extrac-
muy bajas de falsos negativos (0.8% a 2.7%). ción de coágulos con cateter de Fogarty.

310
CAPÍTULO XXX: TRAUMA VASCULAR PERIFÉRICO

4. Identificar y aislar la mayor parte de cola- MANEJO POSTOPERATORIO


terales, respetando su integridad.
5. Disecar la arteria en suficiente amplitud. El compromiso distal de la extremidad debe
6. Extraer el tejido no viable. monitorizarse cuidadosamente, al menos du-
7. Abrir el vaso cuando hay sospecha de des- rante las primeras 24 horas, con controles ho-
prendimiento intimal, desbridar hasta don- rarios de pulsos, color, temperatura y llenado
de se encuentre pared arterial normal. capilar.
8. Recubrir el área cruenta con tejidos blan-
dos sanos. No deben utilizarse vendajes circulares y debe
9. Practicar fasciotomías amplias en caso de controlarse de cerca la aparición de edema.
necesidad. La extremidad debe mantenerse en posición
10.Tratar siempre de reparar la vena si esta de leve flexión. Los movimientos musculares
lesionada. se inician precozmente y la deambulación tan
11.Obtener una arteriografía operatoria al fi- pronto lo permiten las otras lesiones. Los anti-
nal del procedimiento. bióticos iniciados en el preoperatorio deben
mantenerse hasta completar el ciclo de trata-
TIPOS DE REPARO miento.

Rafia lateral: es la sutura mas utilizada en heri- La trombosis arterial aguda es la complicación
das por arma cortopunzante, con lesiones de mas frecuente. Lo principales factores de ries-
bordes nítidos y tangenciales. Este tipo de go son las suturas a tensión, el inadecuado
reparo es útil cuando no hay compromiso de desbridamiento arterial, la presencia de trom-
más de 30% de la circunferencia de la arteria. bos residuales distales, las estenosis de la lí-
nea de sutura, el acodamiento y la compre-
Reparo lateral con parche venoso: se utiliza sión externa del injerto.
principalmente para prevenir la estenosis.
La infección puede causar disrupción de la lí-
Anastomosis termino-terminal: es la técnica nea de sutura, seguido de hemorragia masi-
mas efectiva y mas utilizada. Su aplicación va, súbita y potencialmente fatal. En casos de
depende de la longitud de la arteria y del ta- infección no debe intentarse un nuevo reparo;
maño de la lesión. por el contrario deben retirarse todos los in-
jertos sintéticos. Es imperativa la ligadura de
Injertos vasculares: se utilizan cuando no es los dos cabos arteriales, con la posibilidad de
posible realizar anastomosis directa por exce- un injerto extra-anatómico.
siva tensión. El mas utilizado es la vena safena
del mismo paciente. La estenosis temprana es el resultado de una
deficiente técnica quirúrgica. La obstrucción
Los pulsos distales deben palparse inmedia- tardía es causada por hiperplasia de la íntima
tamente luego del reparo. Si no están presen- en la línea de sutura y se puede manifestar
tes deben considerarse varias posibilidades: semanas o meses después.
anastomosis inadecuada, trombo distal o le-
sión arterial distal al reparo.

311
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LESIONES DE LA ARTERIA En circunstancias de emergencia, la esterno-


SUBCLAVIA tomía media, con o sin toracotomía comple-
mentaria (Trap door) a nivel del tercer espa-
Las que no son fatales, generalmente son pro- cio intercostal, permite la exposición del me-
ducidas por heridas penetrantes, armas corto- diastino, la arteria innominada y las estructu-
punzantes o proyectiles de baja velocidad. El ras adyacentes.
trauma cerrado rara vez lesiona la arteria sub-
clavia, aunque las espículas óseas de las frac- La ligadura de la arteria subclavia resulta en
turas de clavícula o primera costilla pueden un porcentaje de amputación de 28,6%. Con
lacerarla. las modernas técnicas de reparo la tasa de
amputaciones desciende a menos de 6%.
La hemorragia masiva y el choque son hallaz-
gos que aparecen en mas de 50% de los pa-
cientes. Debe considerarse la posibilidad de LESIONES DE LA ARTERIA
compromiso de la arteria subclavia en cual- AXILAR
quier paciente con lesión penetrante de la ba-
se del cuello y hemotórax. Los signos clásicos En la vida civil la mayoría de las lesiones son
de lesión arterial pueden encontrarse presen- producidas por arma cortopunzante o proyec-
tes en la extremidad lesionada, dependiendo tiles de baja velocidad. La ruptura de la arte-
de la efectividad de la circulación colateral. ria axilar es una complicación poco frecuente
La radiografía del tórax puede mostrar hema- de la luxación anterior de hombro y de la frac-
toma en la base del cuello con hemotórax o tura desplazada del cuello del húmero. Igual-
ensanchamiento mediastinal. mente, la arteria se puede lesionar en algu-
nos procedimientos como la mastectomía ra-
Las indicaciones de arteriografía son: dical o durante la resección de la primera cos-
• Hematoma mediastinal por trauma cerrado. tilla por síndrome del opérculo torácico.
• Ausencia de pulsos en miembros superio-
res. Se encuentra hipovolemia severa en 40% de
• Hipovolemia persistente a pesar del reem- los casos. Usualmente hay alteración de los
plazo de líquidos. pulsos distales del miembro superior, hipoter-
• Sangrado no explicado en el tórax. mia distal y la presencia de hematoma axilar
• Parálisis del plejo braquial con hematoma expansivo. Con frecuencia se halla compro-
axilar. miso nervioso periférico.

En hemorragia masiva, la cirugía inmediata La arteriografía continua siendo el método


esta indicada para evitar la exaguinación. Para diagnóstico mas preciso y es de singular utili-
la arteria subclavia intratorácica el abordaje dad en el trauma cerrado, pues por lo menos
de elección es la toracotomía anterior izquier- en un tercio de los casos puede existir lesión
da a nivel del tercer espacio intercostal. Las arterial con pulsos distales normales.
lesiones de la subclavia izquierda distal o la
subclavia derecha pueden controlarse a tra- El acceso quirúrgico se lleva a cabo por vía
vés de una incisión supraclavicular, con sec- axilar, en ocasiones es necesario prolongar
ción del esternocleidomastoideo y del esca- la incisión para control proximal a nivel de la
leno anterior. subclavia.

312
CAPÍTULO XXX: TRAUMA VASCULAR PERIFÉRICO

LESIONES DE LA ARTERIA HUMERAL La exposición de las porciones proximales de


ambas arterias puede lograrse con una inci-
Con el incremento en el número de procedi- sión a través de la fosa cubital. Junto al repa-
mientos diagnósticos invasivos de tipo cardio- ro arterial deben practicarse las neurorrafias
vascular, se ha incrementado la posibilidad de y tenorrafias que estén indicadas o manejar-
daño iatrogénico. No solamente el trauma di- se como urgencias diferidas.
recto del vaso, sino las fracturas y luxaciones
del humero pueden lesionar la arteria, en par- Las amputaciones solo ocurren en 5% luego
ticular las fracturas supracondíleas. de la ligadura de la arteria radial y en 1,5%
luego de ligar la cubital. Si se ligan las dos, la
Los hallazgos clínicos usuales incluyen hipo- tasa de amputaciones llega casi a 40%.
perfusión e hipotermia de la mano, con ausen-
cia del pulso radial, compromiso de la sensi-
bilidad y la función motora. De nuevo, un pul- LESIONES DE LAS ARTERIAS
so radial palpable no descarta la lesión. La FEMORALES
arteriografía es el método diagnóstico más im-
portante para confirmarla. Aunque la causa más frecuente de lesión fe-
moral es el trauma penetrante, requiere men-
La exposición quirúrgica se logra mediante ción especial la laceración que puede ocurrir
una incisión longitudinal, con posibilidad de luego de canulación para procedimientos inva-
prolongación axilar o antecubital. Debe tener- sivos diagnósticos (Arteriografía) o terapéuti-
se particular cuidado con el nervio mediano. cos (Canulación para circulación extracor-
pórea, angioplastia, balón de contrapulsación).

LESIONES DE LAS ARTERIAS La arteria femoral profunda es particularmen-


RADIAL Y CUBITAL te vulnerable durante cirugía ortopédica, prin-
cipalmente en fracturas de cadera o reduc-
Gracias a la existencia de los arcos arteriales ción de fracturas intertrocantéricas.
de la mano, la lesión individual y aislada de
estas arterias no es crítica. Sin embargo, debe En la mayoría de los pacientes se presenta
documentarse la integridad de por lo menos sangrado masivo que ocasiona severa hipovo-
una de ellas antes de emprender cualquier lemia. En trauma cerrado puede ocurrir trom-
procedimiento exploratorio. bosis por desprendimiento de la íntima.

La arteria radial puede ser lesionada en un La arteria femoral superficial es una de las más
intento suicida y en casos de accidentes rela- frecuentemente lesionadas, debido a su longi-
cionados con vidrio. El primer signo de lesión tud y a su situación superficial. Su importan-
radiocubital puede ser la aparición de un he- cia en la práctica civil radica en su asociación
matoma subfascial compresivo. con fracturas de fémur, en las que el retardo
en el diagnóstico y manejo pueden resultar
El test de Allen y sus modificaciones utilizando en isquemia crítica del miembro.
métodos no invasivos como el Doppler y el Du-
plex Scan son útiles en el diagnóstico. Las frac- La simple presencia de una herida cerca a los
turas y los cuerpos extraños deben descartar- vasos femorales debe alertar al cirujano res-
se con proyecciones radiográficas de rutina. pecto de la posibilidad de una lesión. Una

313
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

herida con sangrado activo hace evidente el cirugía vascular por el alto índice de amputa-
diagnóstico. ciones a pesar del reparo quirúrgico.

Pueden encontrarse grandes hematomas pul- Las lesiones pueden ser producidas por frag-
sátiles. Sin embargo, el diagnóstico se dificulta mentos de proyectiles, heridas por arma corto-
mas cuando existen pulsos distales. Por esto, punzante y golpe directo en accidentes auto-
en presencia de pacientes hemodinámicamen- movilísticos. Con frecuencia se asocia a frac-
te estables, se prefiere una angiografía preope- turas y luxaciones de rodilla, en las que gene-
ratoria, la cual esta particularmente indicada ralmente se observa hiperextensión de la ar-
en casos de sospecha de lesión vascular aso- teria con desgarro de la intima, especialmente
ciada a fractura cerrada, pues la exploración en las luxaciones anteriores, debido a la rela-
arterial convierte la fractura en abierta. tiva fijación de la arteria poplítea en relación
con el anillo de los aductores y el arco fibroso
La reconstrucción incluye los pasos ya descri- del soleo. En las luxaciones posteriores se tra-
tos de desbridamiento, trombectomía, recons- ta de una lesión directa.
trucción y anticoagulación. Las técnicas a uti-
lizar se rigen por los mismos principios de via- La arteriografía muestra en general la exten-
bilidad y utilidad. sión de la lesión vascular, la presencia de trom-
bosis y la suplencia de las colaterales.
La reconstrucción de la femoral profunda debe
considerarse si el vaso es grande y el reparo Se puede practicar un abordaje posterior o la-
sencillo. Aunque el riesgo de amputación no teral, siguiendo el curso del músculo sartorio.
es muy alto, se ha descrito claudicación luego Las fracturas deben manejarse con fijación ex-
de su ligadura. terna. La fasciotomía debe considerarse seria-
mente si la extremidad ha permanecido isqué-
Si el edema es extenso, la fasciotomía de los mica por varias horas o el edema es marcado.
compartimentos por debajo de la rodilla esta Los pulsos deben detectarse a la palpación o
indicada, en especial si ha transcurrido más por Doppler inmediatamente después de la
de seis horas desde el momento de la lesión, reconstrucción.
cuando se ha practicado ligadura de varias
venas o cuando se encuentra lesión extensa Un gran porcentaje de pacientes con lesión
de tejidos blandos. de arteria poplítea y obstrucción vascular de
más de ocho horas de evolución terminan am-
La lesión concomitante de la vena femoral de- putados. De hecho 30% del total de pacientes
be ser reparada en lo posible. Las fracturas con lesión de los vasos poplíteos termina en
de fémur deben estabilizarse con fijación ex- amputación.
terna antes de realizar el reparo arterial. La
utilización de fijación interna es discutible.
LESIONES DE ARTERIAS TIBIALES
Y PERONERAS
LESIONES DE LA ARTERIA
POPLÍTEA El trauma de estas arterias ha sido general-
mente subestimado y se menciona muy bre-
Las lesiones de la arteria poplítea continúan vemente en los reportes tanto militares como
siendo uno de los mayores problemas de la civiles. El diagnóstico precoz de las lesiones

314
CAPÍTULO XXX: TRAUMA VASCULAR PERIFÉRICO

es crítico, especialmente cuando mas de un 10. Adebo O. Limb salvage in peripheral vascular trau-
vaso se encuentra lesionado. Los signos de ma. West Afr J Med. 1996; 15(3): 139-42.
isquemia son frecuentes cuando hay lesión 11. Magee TR; Collin J; Hands,-L-J; Gray,-D-W; Roake
J.A ten year audit of surgery for vascular trauma
de dos o tres ramas. La sospecha se confirma
in a British teaching hospital. Eur-J-Vasc-
mediante arteriografía. Endovasc-Surg.1996. 12(4): 424-7.
12. Henzan E. Damage control in vascular trauma.
La hemorragia puede controlarse con la sim- Nipón-Geka-Gakkai-Zasshi. 2002, 103: 521-3.
ple presión. Las fracturas deben estabilizarse 13. Rich NM; Leppaniemi, A. Vascular trauma: a 40
externamente. year experience with extremity vascular emphasis.
Scand-J-Surg. 2002; 91(1):109-26.
Aunque debido al tamaño reducido de las ar- 14. Wolf y G; Rivkind, A. Vascular trauma in high-ve-
terias la reconstrucción es difícil, debe siempre locity gunshot wounds and shrapnel-blast injuries
intentarse el reparo vascular acompañado de in Israel. Surg Clin North Am. 2002; 82:237-44.
fasciotomía, especialmente cuando hay lesión 15. Morales C.H. Sanabria; Sierra J.M. Vascular trau-
ma in Colombia: experience of a level I trauma
venosa asociada. La tasa de amputaciones
center in Medellín. Surg Clini North Am.
luego de la ligadura de la arteria tibial poste- 2002;82:195-210.
rior es de13,5%. Cuando se liga la tibial ante- 16. Fingerhut A; Leppaniemi A.K, Androulakis, G.A.
rior es de 8,5%. Cuando se ligan ambas arte- Archodovassilis. The European experience with
rias la cifra asciende a casi 70%. vascular injuries. Surg Clin North Am. 2002;
82:175-88.
17. Velmahos G.C; Toutouzas,K-G. Vascular trauma
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315
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXXI

Trauma del hígado

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Jefe Honorario, Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

Alonso Vera, MD
Jefe del Servicio de Trasplante de Órganos
Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l hígado, como el órgano intra-abdominal


y subdiafragmático sólido de mayor volu-
men, que ocupa la mayor parte del cuadrante
el ultrasonido, al lado de la cama del paciente,
es empleado de manera creciente como el mé-
todo diagnóstico primordial para la detección
superior derecho y se extiende hasta el lado de hemoperitoneo y de lesión de órganos sóli-
izquierdo del paciente, es, después del bazo, dos (Pachter et al 2002; Richards 1999), mien-
el que más frecuentemente resulta lesionado tras la tomografía computadorizada se ha con-
por trauma cerrado o penetrante, tanto del solidado como el procedimiento imagenológi-
abdomen como de la parte inferior del tórax co estándar para la evaluación del estado del
derecho. Un entendimiento claro de la anato- hígado en pacientes hemodinámicamente
mía hepática (Bismuth 1982; Buechter et al estables.
1990; Couinaud 1957) es esencial para el ma-
nejo de las heridas de hígado y su tratamiento. En cuanto al manejo del trauma hapático, la
década de 1990 marca un verdadero cambio
El trauma de magnitud suficiente para afectar de paradigma: del tratamiento quirúrgico al
al hígado usualmente resulta en lesiones de manejo no operatorio del paciente hemodiná-
otros órganos. micante estable (Fang et al 2000; Malhotra et
al 2000).
El trauma cerrado puede producir hematoma
intrahepático o fracturas del órgano, mientras La mortalidad asociada con el trauma cerra-
el trauma penetrante comúnmente produce la- do es mayor, del orden de 25% según Pachter
ceraciones; en ambas situaciones puede ha- et al (1991, 2002), que con el trauma pene-
ber desgarro, laceraciones o avulsiones vas- trante. La mortalidad global varía entre 7% y
culares. Es con base en estos cuatro tipos de 15%, y se acrecienta según la severidad del
lesiones que se establece la gradación y cla- trauma y la presencia de lesiones intraabdomi-
sificación del trauma del hígado. nales asociadas (Brammer et al 2002).

En años recientes ha habido una importante La gravedad de las lesiones oscila entre las
evolución en el diagnóstico y tratamiento del mínimas (Grados I y II), que representan la gran
trauma del hígado. En el servicio de urgencias, mayoría, y las muy complejas (Grados III-V).

316
CAPÍTULO XXXI: TRAUMA DEL HÍGADO

CLASIFICACIÓN o por compresión, así como a fracturas he-


páticas y a amputación de segmentos. Los
Según la causa, el trauma hepático se puede traumas cerrados pueden tener un compo-
clasificar de manera general en dos tipos: nente penetrante, cuando se asocian con
fracturas costales.
1. Trauma cerrado: cuando el mecanismo de 2. Trauma penetrante: generalmente se de-
injuria es la compresión brusca del abdo- be a heridas por proyectil de arma de fue-
men superior o de la porción inferior del go o por arma cortopunzante. Los daños
hemitórax izquierdo. Puede producir disrup- dependen del recorrido y del compromiso
ción de la cápsula de Glisson y fracturas de las estructuras vasculares y/o biliares.
del parénquima hepático que pueden ir Es importante recalcar que las heridas por
desde un desgarro mínimo hasta un grave arma de fuego producen, en general, un
compromiso vascular, de las venas supra- trauma mayor con desvitalización asocia-
hepáticas, de la vena cava, de la arteria da del parenquima.
hepática y de la vena porta. Además, pue-
de producir fístulas biliares. El trauma pue- Clasificación del trauma hepático revisada
de dar lugar a desvitalización del parén- por la American Association for the Surgery of
quima hepático por compromiso vascular Trauma (Pachter et al 2002).

Gradosa Descripción de la lesión


I Hematoma Subcapsular <10 % área de superficie. Desgarro capsular, no hemorrágico, <1cm de profundidad parenquimatosa.
Laceración
II Hematoma Subcapsular, no en expansión, 10-50% del área de superficie: intraparenquimatoso, no en expansión, <10 cm
Laceración diámetro. Desgarro capsular, hemorragia activa; 1-3 cm profundidad parenquimatosa, <10 cm de extensión.
III Hematoma Subcapsular, > 50% de área o en expansión; hematoma subcapsular roto con hemorragia activa; hematoma
Laceración intraparenquimatoso >10 cm o en expansión.>3 cm de profundidad parenquimatosa.
IV Hematoma Hematoma intraparenquimatoso roto con hemorragia activa.Rotura parenquimatosa que compromete 25-75%
Laceración de lóbulo hepático o 1 a 3 segmentos de Couinaud en un solo lobulo.
V Laceración Disrrupción del parenquima comprometiendo 75% del lóbulo hepático o > 3 segmentos de Couinaud en lóbulo
Vascular simple. Lesiones venosas yuxta-hepáticas (es decir, vena cava retroehepática/venas hepáticas mayores).
VI Vascular Avulsión hepática

La principal causa de muerte en pacientes con das: venas hepáticas, vena cava retrohepáti-
trauma hepático es la hemorragia con desan- ca, ramas de la arteria hepática, ramas de la
gramiento. La segunda es la sepsis, intra o vena porta, canales biliares y parénquima
extra-abdominal. El tratamiento está orientado hepático.
al control de la hemorragia y a la preven-
ción de la infección.
DIAGNÓSTICO
La clave en el manejo del trauma hepático es
adoptar una modalidad terapéutica selectiva Los pacientes con trauma hepático presentan
con base en las diversas estructuras afecta- sintomatología que puede ser el resultado de

317
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

las múltiples lesiones que lo acompañan y que, ULTRASONOGRAFÍA


por consiguiente, no es específica. Sin embar-
go, la hemorragia por una herida hepática ma- Es el método no invasor más fácilmente acce-
yor (trauma penetrante o cerrado) puede ser sible, puede ser realizado al lado de la cama
aparente en la admisión por hipovolemia, ab- del paciente por el cirujano mismo; se ha ex-
domen distendido, anemia y presencia de lí- pandido tan rápidamente hasta el punto de
quido en el examen mediante ultrasonido. convertirse en parte regular de los recursos
quirúrgicos (Pachter et al 2002). Su limitación
Trauma penetrante: la dirección del recorri- principal es ser fundamentalmente operador-
do del proyectil puede ser de ayuda en la sos- dependiente. Puede revelar líquido intraperito-
pecha diagnóstica de trauma hepático. Las neal (hemoperitoneo) y fracturas hepáticas.
heridas del tórax inferior pueden comprometer Actualmente es usado como técnica de tami-
el hígado a través del diafragma. El uso de la zaje de emergencia en los servicios de urgen-
tomografía axial computadorizada es de máxi- cias (Richards et al 1999; Sisley et al 1998).
ma utilidad en pacientes estables. Una esca- En muchos casos la ultrasonografía de emer-
nografía helicoidal (TAC helicoidal) permite gencia evita la necesidad de realizar TAC, con
hacer el estudio en 10-15 minutos. el consiguiente ahorro de tiempo y costos
(Rose et al 2001).
Trauma cerrado: la sintomatología puede ser
muy sutil y simplemente manifestarse por leve
dolor en el cuadrante superior derecho. Se de- TOMOGRAFÍA AXIAL COMPUTADORIZADA
be prestar atención a las manifestaciones clí- (TAC)
nicas que hacen sospechar una lesión del hí-
gado o de la vía biliar: Es el “patrón oro” en la evaluación del trauma
hepático. Puede identificar lesiones como dis-
• Abrasiones, equimosis o dolor a la palpa- rupción del parénquima, hematomas y sangra-
ción, sobre el cuadrante superior derecho do intrahepático. Con medio de contraste se
del abdomen. pueden visualizar áreas de hipoperfusión y
• Fracturas costales o signos de trauma so- pseudoaneurismas. La correlación de la TAC
bre el hemitórax inferior derecho. con los hallazgos intraoperatorios puede no
• Inestabilidad hemodinámica o shock franco. ser precisa, porque tiende a subestimar la le-
• Punción o lavado peritoneal positivos para sión (Croce et al). Es usado en pacientes esta-
sangre o bilis. bles hemodinámicamente, y sólo los pacientes
hemodinámicamente estables son candidatos
para TAC. En esta era de tratamiento no qui-
AYUDAS DIAGNÓSTICAS rúrgico selectivo, el conocimiento de la natura-
leza de la lesión es esencial, y la TAC es el
A menos que el paciente haya sido llevado en mejor método para su demostración. No debe
forma inmediata y urgente a salas de cirugía ordenarse TAC en aquellos casos en que, por
por hipovolemia, se deben realizar estudios cualquier razón, ya es imperativa y clara la
adicionales. El ultrasonido, la TAC de abdo- indicación de laparotomía: una TAC causaría
men y el lavado peritoneal son los procedi- perjudiciales demoras y representaría un costo
mientos más usados. superfluo.

318
CAPÍTULO XXXI: TRAUMA DEL HÍGADO

LAVADO PERITONEAL DIAGNÓSTICO (LPD) luación de la vía biliar y de la vasculatura


hepática en pacientes estables.
Durante las últimas tres décadas el lavado
peritoneal desempeñó un papel fundamental
en la evaluación de inicial de los pacientes LAPAROSCOPIA
traumatizados con sospecha de lesión intra-
abdominal (Pachter et al 2002), y todavía es Al tiempo que es un procedimiento valioso en
de gran utilidad en localidades donde no se la evaluación de heridas cortopunzantes y por
encuentren disponibles la ultrasonografía ni armas de fuego, su papel en la evaluación del
la TAC. Antes del advenimiento del manejo paciente que puede tener una lesión hepática
no quirúrgico del trauma hepático, la laparoto- no está definido, principalmente por la posibi-
mía exploratoria estaba indicada cuando el re- lidad de que pasen inadvertidas lesiones enté-
cuento de glóbulos rojos era mayor de ricas y esplénicas (Pachter et al 2000).
100.000/mm3 en el fluido recobrado del abdo-
men. El LPD conserva su rol en pacientes
inestables hemodinámicamente, con trauma TRATAMIENTO
craneoencefálico severo que necesitan una
TAC cerebral o angiografía pélvica y la presen- Selección del Tratamiento: Expectante vs.
cia de sangrado abdominal debe ser excluido; Quirúrgico.
sin embargo, actualmente el ultrasonido pro-
vee una información más certera y más rápida. TRAUMA CERRADO

La mayoría de las lesiones hepáticas por trau-


ARTERIOGRAFÍA ma cerrado documentadas por ultrasonido o
por TAC pueden y deben ser manejadas de
La TAC puede suministrar información similar. manera expectante (Carrillo 1998; Malhotra et
Sin embargo, la arteriografía puede ser de al 2000; Pachter et al 2002). Pacientes esta-
gran utilidad en casos seleccionados que dan bles hemodinámicamente en quienes la TAC
espera. Juega un rol muy importante en el ma- no revela lesiones extrahepáticas son mane-
nejo no operatorio de la hemorragia y en el de jadas no-operatoriamente, independiente del
la hemobilia. Con frecuencia se lo utiliza con grado de severidad de la lesión y del volumen
anterioridad a la reexploración que se hace aparente del hemoperitoneo (Sherman et al
luego de un empaquetamiento hemostásico 1994). O sea, que la política en el manejo del
en pacientes con grandes y complejos trauma- trauma hepático cerrado es la de mínima inter-
tismos. La embolización angiográfica ha ad- vención. La mayor parte de los pacientes he-
quirido un papel de importancia en los casos modinámicamente estables son candidatos
de trauma hepático complejo, y puede ser rea- para esta modalidad terapéutica, y se logra
lizada inmediatamente después del procedi- éxito con ella hasta en el 95% de los casos
miento operatorio inicial (Asensio et al 2000). (Fang et al 2000). Este tipo de manejo se basa
en la capacidad de la TAC para identificar de
manera confiable lesiones abdominales no he-
RESONANCIA MAGNÉTICA NUCLEAR páticas, especialmente lesiones intestinales.
Los hallazgos peritoneales al examen de
Su papel no ha sido completamente estable- ingreso lejos de la herida son contraindicación
cido, pero puede estar relacionado con la eva- para el manejo no operatorio.

319
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Puyana y Aldrete (1997) enumeran así los ele- MANEJO NO OPERATORIO


mentos que deben estar presentes para el
manejo no operatorio del trauma de hígado: El manejo expectante de la ruptura hepática
en el paciente hemodinámicamente estable se
• Estabilidad hemodinámica. impuso en el decenio de 1990.
• Examen físico del abdomen dentro de lí-
mites normales. La laparotomía de urgencia está indicada en
• Integridad neurológica. heridas por arma de fuego en el abdomen o
• Definición de la lesión por TAC. en el tórax, cuando la trayectoria del proyectil
• Ausencia de lesiones intraabdominales sugiere penetración al abdomen (Demetriades
concomitantes. 1997) El seguimiento de la trayectoria del pro-
• Mínimo requerimiento de transfusiones yectil por TAC es importante para la selección
sanguíneas (<2)*. de pacientes de manejo no operatorio (Gross-
• Mejoramiento de la lesión, demostrado por man et al 1988). Estas políticas han eliminado
progresión de los hallazgos radiológicos laparotomía en todos los casos de herida pe-
* Otros autores dan <4 unidades de sangre netrante que no ingresan a la cavidad abdomi-
como criterio para el manejo expectante nal (heridas tangenciales) y las penetrantes
(Carrillo et al 1997). que sin lesión de órganos críticos (50% de he-
ridas por arma cortopunzante y 30% de heri-
Técnicas adyuvantes de intervención no ope- das por arma de fuego). Si no se tiene expe-
ratoria son de gran valor en el manejo no quirúr- riencia y hay carencia de facilidades para mo-
gico del trauma hepático, tales como emboli- nitoría permanente del paciente, el manejo
zación arterial (angiografía), drenaje guiado por conservador no es recomendado. El cirujano
TAC, CPRE con esfinterotomía y colocación de debe estar siempre disponible para evaluar el
“stents” y laparoscopia (Carrillo et al 1999). curso del paciente; las primeras 12-24 horas
son las más críticas. El periodo de hospitaliza-
ción debe ser individualizado según el grado
TRAUMA PENETRANTE de la lesión, pero en general se recomienda
no menos de 5 días. La observación clínica
En general las heridas penetrantes civiles del puede ser difícil de interpretar por la presencia
hígado resultan en lesiones de menor grave- de dolor abdominal y fiebre secundaria a la
dad que las lesiones por trauma contuso; por irritación por sangre en la cavidad abdominal.
consiguiente, se puede emprender el manejo
no operatorio en casos debidamente seleccio- La progresión de signos de irritación peritoneal
nados, siempre que haya estabilidad hemodi- o sangrado pueden ser indicación quirúrgica.
námica y no se detecten otras lesiones intra- En general el propósito de la laparotomía es
abdominales (Pachter et al 2002). El manejo el control de la hemorragia. Sin embargo, ac-
selectivo es generalmente recomendado para tualmente algunos pacientes con sangrado
heridas por arma cortopunzante. La cirugía es- pueden ser seleccionados para angiografía
ta indicada cuando hay inestabilidad hemo- diagnóstica y terapéutica (Ciraulo et al 1998).
dinámica, descenso continuo del hematocrito, Algunas escuelas practican angiografía en el
dolor abdominal lejos de la herida, rigidez in- 100% de los traumas severos demostrados
voluntaria de la pared abdominal, evisceración por TAC, con un porcentaje de positividad
intestinal o del omento o cualquier evidencia >50%. La angiografía es diagnóstica, pero
de irritación peritoneal. también terapéutica mediante la embolización.

320
CAPÍTULO XXXI: TRAUMA DEL HÍGADO

La indicación de angiografía en el paciente he- que requieren cirugía están clasificados como
modinámicamente estable es salida de medio lesiones Grado IV y V.
de contraste o un punto de muy alta densidad
El uso de la TAC en el seguimiento de estos
de medio de contraste en el área de la lesión
pacientes es recomendado por algunos en
hepática.
lesiones severas (en lesiones Grado IV y V).
El tiempo de recuperación necesario para re-
En pacientes inestables, la eficacia de la an-
gresar a actividades exigentes, como depor-
giografía está siendo establecida en casos
tes de contacto, es de unas 8 semanas.
selectos de lesiones documentadas en TAC.
Si la angiografía no esta disponible, el mane- Carrillo y asociados (1999) presentan el si-
jo no-quirúrgico debe ser abandonado y el pa- guiente algoritmo para el manejo de pacien-
ciente debe ser operado en caso de inestabi- tes que presentan sangrado tardío luego de
lidad hemodinámica. La mayoría de pacientes trauma cerrado del hígado.

Hemorragia tardía

Estable No estable

Lesión hepática sin cambio Lesión ha empeorado.


Medio se localiza

Buscar otras causas Angiografía


Embolización

MANEJO OPERATORIO quetados en cantidad suficiente, así como


plasma fresco, plaquetas y críoprecipitado,
El hospital debe poseer todos los servicios y equipos de rápida infusión y calentadores
la infraestructura de soporte necesarios: de sangre, así como todas las medidas
para el manejo de la hipotermia.
• Disponibilidad inmediata de cirujanos y • Unidad de cuidado intensivo.
anestesiólogos idóneos y con experiencia
en la atención de trauma complejo. En ausencia de tales facilidades, el mejor ma-
• Banco de sangre con capacidad para pro- nejo puede ser la laparotomía y empaqueta-
veer sangre total y glóbulos rojos empa- miento hemostásico y el pronto traslado del

321
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

paciente a una entidad hospitalaria de nivel anterior del hígado que podría llevar a una
terciario que cuente con un servicio especiali- exanguinación total. En este momento el pa-
zado de cirugía hepática. ciente debe ser repletado con transfusión de
sangre (un equipo de rápida infusión es desea-
El manejo quirúrgico de las lesiones del híga- ble), manteniendo las medidas para el mante-
do requiere un buen conocimiento de la anato- nimiento de la temperatura corporal. Si el ciru-
mía quirúrgica del órgano, por cuanto su es- jano no está capacitado para embarcarse en
tructura segmentaria, tanto la del sistema la reparación de una lesión vascular de esta
portal como la de los sistemas de la arteria magnitud, el empaquetamiento es la decisión
hepática y de drenaje de las venas hepáticas, correcta. Ninguna técnica quirúrgica ha alcan-
constituye el fundamento para la toma de de- zado una mortalidad menor de 50% hasta el
cisiones en el curso de una laparotomía por momento para este tipo de lesiones.
lesión hepática mayor.
Hipotermia, coagulopatía y muerte por disfun-
Los siguientes son principios que deben ser ción cardiaca son consecuencia de cirugías
observados al emprender cirugía por trauma prolongadas y de trasfusiones múltiples. Se
del hígado. recomienda el empaquetamiento cuando el pH
es <7,2 y/o la temperatura es menor de 32 oC
Incisión: la que provea mejor exposición; una (no hay que esperar dichos valores para
larga incisión subcostal derecha con extensión hacerlo).
hasta el flanco es muy adecuada y permite
buen acceso a la región posterior del hígado, La decisión de exploración quirúrgica y el ma-
especialmente al combinarla con la debida nejo de las fracturas parenquimatosas exten-
posición del paciente y el “quiebre” de la mesa. sas dependen de experiencia y habilidad del
Puede ser necesaria la extensión de la incisión cirujano, pero en términos generales el prin-
como esternotomía de línea media o al tórax cipio de no hacer daño es mandatorio.
derecho a través del diafragma.
Diversas técnicas hemostásicas han sido des-
Exploración: la presencia de sangre y coá- critas para el control del sangrado hepático
gulos en el cuadrante superior derecho del ab- (Feliciano & Pachter 1989; Pachter 2002). La
domen hacen pensar en una herida hepática. compresión de los bordes de la herida para
En caso de sangrado el empaquetamiento lograr control por compresión de los vasos cer-
temporal mientras se evalúa el resto de la canos a la superficie o por fractura del parén-
cavidad abdominal esta indicado. quima hepático con el dedo para lograr hemos-
tasia. Ante la evidencia de sangrado importan-
Movilización del hígado: mediante división te del sitio de fractura hepático, la maniobra
de los ligamentos suspensorios, un aspecto de Pringle (1908) de oclusión de la tríada por-
fundamental del manejo quirúrgico, excepto tal con una pinza vascular atraumática que
en las heridas del tracto gastrointestinal. interrumpe el flujo vascular hepático puede ser
de gran ayuda; el tiempo de oclusión debe ser
Control de la hemorragia: si la fractura he- <1 hora. Esta maniobra permite el mejor exa-
pática se dirige hacia el domo y se aproxima men de la herida para identificar la fuente de
a la región retrohepática, se deben sospechar sangrado, ocasionalmente la incisión puede
lesiones de las venas suprahepáticas y la ser ampliada. La combinación de la técnica
cava, por lo cual se debe evitar la retracción de la fractura con el dedo, en combinación con

322
CAPÍTULO XXXI: TRAUMA DEL HÍGADO

la maniobra de Pringle, se ha consolidado ramas de la vena porta ni de las venas hepá-


como un componente integral y crucial en el ticas mayores o sus tributarias intrahepáticas.
manejo de las heridas hepáticas complejas Cuando se liga la arteria hepática derecha o
(Pachter et al 2002). la propia, se debe hacer colecistectomía por
el peligro de necrosis de la vesícula biliar. Hoy
La sutura del parénquima hepático es un re- en día el empaquetamiento con una posterior
curso muy importante para la ligadura selecti- embolización arterial es la terapia de elección
va de vasos y conductos biliares, lo que es en estos casos.
preferible, o en masa, tratando de evitar es-
tructuras centrales vasculares. La tentación de El empaquetamiento o empaque perihepá-
suturar el sitio de entrada y salida debe ser tico con reexploración subsecuente ha proba-
evitada, debido a la posibilidad de hematoma do ser un método salvador en casos de heri-
intraparenquimatoso, así como de complica- das grado IV y V, especialmente cuando ya
ciones biliares y la formación de abscesos. Sin hay coagulopatía y la reparación aparece com-
embargo, la sutura hepática profunda puede pleja, o cuando la hemorragia no se puede
ser una alternativa a la exploración profunda; localizar con precisión con anterioridad a la
se asocia con riesgos de isquemia segmenta- coagulopatía (Caruso et al 1999; Pachter et
ria y necrosis del parénquima y con sangrado al 2002). Se debe evitar la compresión vas-
postoperatorio. La técnica de suturas profun- cular (vena cava y estructuras del hilio). Pues-
das consiste en colocar múltiples suturas ho- to que la mayoría de las lesiones pueden ser
rizontales de colchonero o simples a través controladas por medidas convencionales, este
del parénquima para cubrir el área de la lesión procedimiento viene a aplicarse, en general,
(Pachter et al 2002). Según Pachter et al en menos del 5% de los casos de heridas del
(2002) hay dos circunstancias que conducen hígado. Pachter et al (2002) señalan que hay
a la colocación de sututras de colchonero pro- consenso general entre los cirujanos trauma-
fundas: 1) cuando hay múltiples lesiones vin- tólogos sobre si una lesión de la vena cava o
culadas que requieren una reparación rápida; una lesión vascular retrohepática (grado V)
2) cuando una coagulopatía exige la termina- pueden controlarse de manera adecuada con
ción rápida de la operación sobre el hígado el método de empaquetamiento perihepático.
lesionado, el taponamiento y la reexploración Luego del empaquetamiento con compresas,
subsecuente. el paciente debe ser transferido a una unidad
de cuidado intensivo y es programado para la
Balones de taponamiento, sondas de Foley reintervención, en ocasiones precedida de
o inclusive balones de Sengstaken-Blakemore arteriografía y embolización selectiva o de una
(Demetriades 1998), pueden ser utilizados co- TAC para caracterizar la lesión y planear el
mo mecanismo de taponamiento temporal y procedimiento definitivo. La reintervención de-
deben ser retirados antes de 72 horas a tra- be ser realizada tan pronto como el paciente
vés de una incisión en la pared abdominal (evi- lo permita, preferiblemente entre las 24 y las
tando la necesidad de reoperación). 36 horas, pero siempre en menos de 72 ho-
ras; diferir más allá de este tiempo significa
La ligadura selectiva de la arteria hepática un creciente riesgo de sepsis. Sin embargo,
ha sido propuesta como medida de salvamen- se ha informado mayor incidencia de resan-
to, pero no es recomendado por la alta inciden- grado cuando el empaquetamiento es remo-
cia de complicaciones sépticas post-opera- vido en menos de 36 horas (Caruso et al
torias. Además, no controla el sangrado de las 1999). El empaquetamiento se asocia con el

323
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

desarrollo del síndrome de compartimiento Control de escape de bilis. El escape de bi-


abdominal por aumento de la presión intraab- lis a la cavidad peritoneal debe ser evitado.
dominal. Nuevos agentes absorbibles para La lesión de pequeños canalículos biliares sólo
empaquetamiento de las heridas hepáticas implica su ligadura, pero la lesión de canales
están emergiendo, así como mallas absorbi- biliares mayores puede significar una resec-
bles para envolver el hígado con resultados ción hepática. Las lesiones del colédoco son
alentadores. manejadas mediante reparación por anasto-
mosis primaria, o, si la vesícula se halla intac-
Desbridamiento de los tejidos desvitaliza- ta, por colecisto-yeyunostomía directa o de
dos. Los traumatismos mayores resultan en Roux-en-Y, o por hepático-yeyunostomía de
segmentos de hígado isquémicos y necróticos, Roux-en-Y o hepático-yeyunostomía término-
que deben ser removidos a fin de evitar focos lateral dejando un asa subcutánea para even-
de severa reacción inflamatoria sistémica y tual acceso percutáneo ulterior. Las lesiones
que den lugar a coagulopatía y a la formación del colédoco distal pueden ser muy difíciles
de abscesos. La técnica de fractura digital del de manejar por las numerosos estructuras ve-
parénquima es útil en tales circunstancias, en cinas, y el manejo de lesión puede ir desde la
combinación con la maniobra de Pringle. ligadura distal y la reconstrucción proximal con
Cuando ya hay coagulopatía, tal técnica está una Y de Roux, a una pancretoduodenecto-
contraindicada y se debe proceder con el mía, procedimiento que en la mayoría de los
método de las grandes suturas. casos se hace en forma diferida.

La resección anatómica no es un procedi- Asensio y colaboradores (2000) manejan la


miento de amplia aplicación, y en la actuali- fístula biliar (definida como drenaje >50 ml por
dad sólo se emplea en menos de 5% de los día luego de 14 días de escape biliar) median-
casos de trauma. Sin embargo, esta técnica te CPRE y colocación de “stent” biliar.
tiene grandes defensores (Strong et al 1998).
Las indicaciones para resección incluyen la Revascularización hepática – trasplante. La
destrucción total del parénquima, una lesión lesión de la tríada portal puede ser muy severa
tan extensa que impida el taponamiento, la y su gravedad y consecuencias dependen del
aparición de una región necrótica después de número de estructuras afectadas. En general,
retirar el taponamiento, cuando la lesión de el hígado puede sobrevivir con un solo aporte
por sí ha hecho prácticamente la resección y vascular, bien sea la arteria hepática o la vena
es fácil completarla y cuando la resección es porta. Es preferible ligar la arteria, pero siem-
el único método para controlar una hemorra- pre se debe intentar la revascularización cuan-
gia desangrante (Pachter et al 2002). La indi- do las condiciones del paciente lo permitan.
cación principal es la desvitalización de sus- La lesión de las dos estructuras vasculares
tancia hepática y/o la lesión asociada con le- se asocia con una mortalidad del 100% y el
sión de las venas hepáticas. La técnica de tratamiento es la hepatectomía total y el en-
Lanuois de ligadura en masa de los pedículos listamiento para trasplante hepático de
(derecho e izquierdo) y la utilización de suturas urgencia.
mecánicas pueden hacer de una hepatecto-
mía derecha cuestión de minutos. Es esen- El drenaje postoperatorio óptimo después
cial que estos procedimientos sean realiza- de reparaciones complejas es por el método
dos en centros hepáticos con buena casuística de succión cerrada. Pero si la lesión es me-
de cirugía de hígado. nor, de grados I y II, no se requiere colocar

324
CAPÍTULO XXXI: TRAUMA DEL HÍGADO

drenes, y tampoco se colocan drenes cuando en cerrar pueden necesitar una CPRE con pa-
se ha empleado la técnica de empaquetamien- pilotomía y/o colocación de “stent” (Asensio
to perihepático. En caso de lesiones biliares, et al 2000). Las colecciones de bilis dentro
un tubo en T o una colecistostomía pueden del hígado se denominan bilioma y deben ser
ser utilizados. drenadas dependiendo de síntomas y tamaño.

La bilemia se puede presentar como conse-


COMPLICACIONES cuencia de la ruptura de un conducto biliar en
venas hepáticas con el consiguiente paso de
Las complicaciones tanto del manejo conser- bilis a la sangre. El tratamiento puede ir des-
vador como del quirúrgico comprenden: hemo- de conservador, pasando por “stent” del con-
rragia, sepsis y alteraciones del tracto biliar (fís- ducto biliar y ocasionalmente resección del
tula biliar, bilioma, estrechez ductal y bilemia). segmento hepático afectado.

El sangrado post-operatorio puede ser se-


cundario a insuficiente hemostasia o coagulo- RESUMEN
patía, politransfusión, hipotermia o insuficien-
cia hepática. Sangrado persistente puede ser Asensio y colaboradores (2000) resumen así
indicación de angiografía. El sangrado que el manejo de las lesiones complejas del híga-
aparece después de un periodo de estabili- do: “Nosotros recomendamos enfáticamente
dad puede ser secundario a hemobilia. La an- la intervención quirúrgica precoz para el con-
giografía permite establecer el sitio del sangra- trol de la hemorragia que ponga en peligro la
do, y en muchos casos controlarlo mediante vida del paciente, empaquetamiento precoz
embolización. según necesidad, angiografía y angioemboli-
zación hepática inmediata con transporte del
La fístula arterio-portal intrahepática es una paciente directamente a la unidad de angio-
complicación rara que se puede manifestar por grafía. La exploración operatoria para remo-
hipertensión portal; el tratamiento es con inter- ción del empaquetamiento y continuado des-
vencionismo radiológico y embolización. bridamiento hepático y drenaje amplio son utili-
zados tan frecuentemente como sea necesa-
La sepsis es multifactorial y el mecanismo de rio. En el postoperatorio, recomendamos in-
infección puede ser exógeno a través de dre- vestigación y tratamiento tempranos de las
nes, por contaminación intraoperatoria o dise- fístulas biliares mediante CPRE, así como TAC
minación vascular. Los segmentos de tejido rutinario como parte del seguimiento”.
devascularizado actúan como cuerpo extraño
y deben ser removidos. El manejo depende
de la presentación y en caso de abscesos es- LECTURAS RECOMENDADAS
tos pueden ser drenados de manera percu-
tanea. La TAC es el principal método diagnós- 1. Asensio JA, Demetriades D, Chahwan S, et al.
Approach to the management of complex hepatic
tico en estos casos.
injuries. J Trauma 2000; 48:66-69.
2. Bismuth H. Surgical anatomy and anatomical
La fístula biliar puede ser establecida me- surgery of the liver. World J Surg 1982; 6:3-9.
diante un HIDA o una TAC y se maneja con 3. Brammer RD, Bramhall SR, Mirtza DF, et al. A 10-
drenaje percutáneo en la mayoría de los ca- year experience of complex liver trauma. Brit J
sos. Las fístulas de alto volumen o que tardan Surg 2002; 89:1532-1537.

325
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

4. Buechter KJ, Zeppa R, Gomez G. The use of seg- nonoperative management in the 1990s. Ann Surg
mental anatomy for an operative classification of 2000; 231:804-813.
liver injuries. Ann Surg 1990; 211:669- 15. Pachter HL, Spencer FC, Hofstetter SR, et al.
5. Carrillo EH, Platz A, Miller FB. Nonoperative ma- Significant trends in the treatment of hepatic trau-
nagement of the blunt hepatic trauma. Brit J Surg ma: Experience with 411 injuries. Ann Surg 1992;
1998; 85:461-468. 215:492-500.
6. Carrillo EH, Spain DA, Wohltmann CD, et al. 16. Pachter HL, Liang HG, Hofstetter SR. Traumas de
Interventional techniques are useful adjuncts in hígado y vías biliares. En: Trauma. KL Mattox, DV
nonoperative management of hepatic injuries. J Feliciano, EE Moore (Editores). Cuarta edición.
Trauma 1999; 46:619-622. McGraw-Hill Interamericana. México, 2002.
7. Caruso DM, Battistella FD, Owings JT, et al. 17. Pringle JH. Notes on the arrest of hepatic hemo-
Perihepatic packing of major liver injuries. Compli- rrhage due to trauma. Ann Surg 1908; 48:541.
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963. ma. Sociedad Panamericana de Trauma. A Rodrí-
8. Ciraulo DL, Luck S, Palter M, et al. Selective guez, Ferrada R (Editores). Sociedad Panameri-
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the non-operative management of blunt hepatic 19. Richards JR, McGahan JP, Pali MJ, Bohnen PA.
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9. Couinaud CL. Le foie anatomiques et chirurgicales. hemoperitoneum and parenchymal patterns of
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10. Croce MA, Fabian TC, Kudsk KA et al. AAST organ 20. Rose JS, Levitt A, Porter J, et al. Does the presence
injury scale: correlation of CT graded injuries and of ultrasound really affect computed tomography
operative findings. J Trauma 31: 806-812. scan use? A prospective randomized trial of
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Selective non-operative management of gunshot 21. Sherman HF, Savage BA, Jones LM. Non
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12. Fang JF, Chen R-J, Lin B-C, et al. Blunt hepatic 22. Sisley AC, Risque G S, Ballard RB, et al. Rapid
injury: minimal intervention is the policy of detection of the traumatic efusión using surgeon-
treatment. performed ultrasonography. J Trauma 1998: 44:
13. Feliciano DV, Pachter HL. Hepatic trauma 291-297.
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hepatic injury: a paradoigm shift from operative to 125: 251-257.

326
CAPÍTULO XXXII: TRAUMA PANCREÁTICO Y DUODENAL

CAPÍTULO XXXII

Trauma pancreático y duodenal

Jorge Alberto Ospina Londoño, MD, FACS


Profesor Asociado, Departamento de Cirugía
Universidad Nacional de Colombia
Director Médico, Clínica del Country
Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l trauma del páncreas y duodeno consti-


tuye un grave problema de diagnóstico y
manejo en los servicios de urgencias como
Esta ubicación de relativa protección contras-
ta con el hecho de que estos órganos tienen
una vecindad anatómica con estructuras vas-
entidad que se asocia con altas tasas de culares cuya lesión suele acompañar a las
morbilidad y mortalidad. Gracias a los avan- lesiones pancreatico-duodenales: aorta, vena
ces en imagenología diagnóstica, especial- cava, vasos mesentéricos, vena porta y las
mente la ultrasonografía y la tomografía axial ramas del tronco celiaco.
computadorizada (TAC), muchos pacientes
que antes tenían una evolución fatal, hoy se La vecindad con el hígado, los riñones, el ár-
salvan gracias a la intervención quirúrgica bol biliar, el colon, el estómago y el intestino
oportuna y eficaz. delgado proximal hacen que frecuentemente
las heridas del páncreas y el duodeno se aso-
El estudio del traumatismo del páncreas y el cien con lesiones de estos órganos.
duodeno debe ser considerado en conjunto,
toda vez que estos órganos mantienen una
estrecha relación anatómica y comparten su INCIDENCIA Y MECANISMOS
circulación y una parte muy importante de la DE LESIÓN
función digestiva.
La lesión del páncreas ocurre en 3-10% de
El páncreas y el duodeno se encuentran ubi- las víctimas de traumatismo abdominal, en
cados profundamente en el retroperitoneo, lo menos de 8% de los casos de traumatismo
cual les confiere una relativa protección por abdominal cerrado, en 10% de los casos de
los órganos intraperitoneales y por la muscu- heridas por proyectil de arma de fuego y en
latura paraespinal y la columna vertebral. Sóla- 5% de los casos de heridas por arma corto-
mente lesiones penetrantes profundas o me- punzante.
canismos severos de trauma cerrado por
compresión abdominal o fuerzas intensas ge- El trauma duodenal tiene una incidencia lige-
neradas por la aceleración y desaceleración ramente menor. En traumatismo cerrado, el
pueden llegar a lesionarlos. duodeno puede estar afectado en cerca de

327
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2% de los pacientes, en trauma penetrante c. Aumento de la presión luminal por el me-


por proyectil de arma de fuego en 8% y en canismo de “asa cerrada” entre el píloro
4% por arma blanca. contraído y el ángulo de Treitz.

Las lesiones que con mayor frecuencia acom-


TRAUMA CERRADO DEL PÁNCREAS pañan al trauma duodenal ocurren en el híga-
do, el colon, el intestino delgado, los riñones
La lesión pancreática por traumatismo cerra- y los grandes vasos abdominales.
do se suele acompañar de lesiones en otros
órganos, que a la postre pueden ser determi- La mortalidad del trauma duodenal cerrado
nantes del pronóstico final: hígado (36%), bazo está directamente relacionada con el tiempo
(30%), riñón (18%) y vasos mayores (9%). transcurrido hasta establecer el diagnóstico:
Afortunadamente la incidencia de lesión duo- la tasa de mortalidad de las lesiones diagnos-
denal por trauma cerrado es baja (<5%). ticadas en las primeras 24 horas es de 20-
30%, en tanto que la de las que se diagnosti-
can después de 24 horas puede llegar a 40-
TRAUMA PENETRANTE 50%. Otro factor determinante de la mortali-
DEL PÁNCREAS dad está relacionado con el número y el tipo
de las lesiones asociadas.
Las lesiones penetrantes del páncreas tienen
una alta incidencia de lesiones asociadas, Cuando se juntan una lesión pancreática y una
principalmente del hígado (25%), colon (25%), lesión duodenal, el riesgo de mortalidad pue-
duodeno (20%), estómago (18%), bazo y ri- de llegar a ser cuatro veces mayor.
ñones (10%). Cerca de 45% de los pacientes
con traumatismo penetrante del páncreas pre-
sentan lesiones vasculares, arteriales o veno- TRAUMA PENETRANTE
sas, lo cual explica por qué cerca de 70% de DEL DUODENO
los pacientes con trauma penetrante del pán-
creas que fallecen lo hacen a causa de una La mayoría de las lesiones duodenales son
hemorragia incontrolable. debidas a traumatismo penetrante, y dentro
de éstas el mayor agente causal son las heri-
das por proyectil de arma de fuego. En este
TRAUMA CERRADO DEL DUODENO caso la mitad de los pacientes tienen tres o
más lesiones asociadas y cuando el meca-
La causa más frecuente de traumatismo duo- nismo es por heridas cortopunzantes, sóla-
denal cerrado son los accidentes de vehícu- mente una tercera parte tiene el mismo nú-
los automotores. El mecanismo del trauma tie- mero de lesiones.
ne que ver con una de tres situaciones:
Las lesiones que con mayor frecuencia acom-
a. Desaceleración súbita con generación de pañan a la lesión duodenal penetrante ocu-
fuerzas que avulsionan el duodeno sobre rren en el hígado, los grandes vasos abdomi-
los puntos que lo fijan a las distintas es- nales, el colon y el intestino delgado.
tructuras abdominales.
b. Compresión directa contra la columna ver-
tebral.

328
CAPÍTULO XXXII: TRAUMA PANCREÁTICO Y DUODENAL

DIAGNÓSTICO 3. Establecer la existencia de lesiones aso-


ciadas:
El retardo en el diagnóstico de las lesiones pan- a. Buscar la existencia de signos perito-
creático-duodenales es un factor decisivo en neales.
la aparición de complicaciones y mortalidad. b. Establecer la existencia de sangrado
gastrointestinal o urinario.
La inadecuada utilización de los diversos mé- 4. Examen físico repetido por un mismo exa-
todos diagnósticos en pacientes con compro- minador buscando signos de defensa ab-
miso hemodinámico o con alguna otra indica- dominal.
ción de laparotomía significa pérdida de tiem-
po valioso que finalmente incide en el pronós-
tico de las lesiones abdominales. El factor EXÁMENES DE LABORATORIO
decisivo más importante para diagnosticar le-
siones pancreático-duodenales, es sospe- El único estudio de laboratorio al cual se
charlas en todo paciente con traumatismo concede algún valor en el diagnóstico de las
abdominal y determinar la indicación de lapa- lesiones pancreáticas o duodenales es la do-
rotomía en el menor tiempo posible. sificación de amilasas, pero teniendo en
cuenta que:
Los elementos más importantes en la evalua-
ción clínica son: 1. Puede haber elevación tanto de la amilasa
sérica como de la urinaria.
1. Mantener un alto índice de sospecha so- 2. La elevación progresiva en el tiempo de los
bre la posibilidad de lesión pancreática o niveles de amilasa, en tomas seriadas, tie-
duodenal. ne mayor importancia que los niveles to-
2. Evaluar el mecanismo de lesión. mados aisladamente.
3. Buscar huellas de traumatismo cerrado en 3. La elevación de los niveles de amilasa pue-
la región alta del abdomen. de estar presente en lesiones de otros seg-
4. Evaluar el trayecto de las lesiones pene- mentos del tracto gastrointestinal o en le-
trantes. siones faciales que afecten la parótida.
5. Establecer la indicación de la exploración 4. Puede existir lesión pancreática o duodenal
quirúrgica. aun en presencia de valores normales de
amilasas séricas o urinarias.
El examen físico no muestra signos específi- 5. En lesiones penetrantes del páncreas los
cos de lesión duodenal o pancreática (pero niveles de amilasas se elevan en menos
recordando que la ausencia de signos abdo- de la cuarta parte de los pacientes.
minales no excluye la lesión pancreática o 6. Hasta una cuarta parte de los pacientes con
duodenal) y más bien debe orientarse a iden- traumatismo pancreático cerrado pueden
tificar alteraciones producidas por las lesio- tener niveles de amilasas dentro del rango
nes asociadas que puedan indicar una explo- normal.
ración quirúrgica temprana:
Esperar a confirmar el diagnóstico de lesión pan-
1. Pensar en la existencia de la lesión pan- creática o duodenal mediante la alteración de
creático-duodenal. los niveles séricos o urinarios de amilasas pue-
2. Establecer la existencia de hemorragia de ocasionar retardo en el diagnóstico que in-
intraperitoneal. cida directamente en el pronóstico de la lesión.

329
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ESTUDIOS RADIOLÓGICOS 1. Es altamente sensible para la detección de


gas o extravasación del medio de contras-
La radiografía simple de abdomen se utiliza te retroperitoneal.
cada vez con menor frecuencia, pero su aná- 2. Permite en algunos casos delinear las ca-
lisis cuidadoso puede suministrar información racterísticas de la lesión pancreática.
de algún valor en pacientes con traumatismo 3. Tiene una alta incidencia tanto de falsos
abdominal. Específicamente para el caso de positivos como de falsos negativos.
las lesiones pancreático-duodenales debe te- 4. Es poco confiable para visualizar los con-
nerse en cuenta: ductos pancreáticos.
5. Su mayor valor reside en el diagnóstico tar-
1. La radiografía de abdomen puede no mos- dío de las lesiones pancreáticas o de las
trar anomalías. complicaciones derivadas del trauma
2. Se ha descrito la escoliosis o el borramiento pancreático.
de la sombra del músculo psoas iliaco en 6. Su sensibilidad aumenta a medida que trans-
pacientes con traumatismo duodenal. curre el tiempo posterior al traumatismo.
3. Hasta en la mitad de los pacientes con per-
foración duodenal la radiografía de abdo-
men puede mostrar burbujas de aire retro- ULTRASONOGRAFÍA (ECOGRAFÍA)
peritoneal que resaltan y rodean la silueta
renal y se extienden a lo largo del músculo Su utilidad principal en el trauma abdominal
psoas. reside en la detección de líquido intraperito-
4. El uso de estudios radiográficos con medio neal que permita decidir sobre laparotomía.
de contraste hidrosoluble está indicado en Específicamente para las lesiones pancreá-
casos seleccionados de pacientes con sos- tico-duodenales:
pecha de lesión duodenal, cuando no exis-
tan otros signos que indiquen una laparo- 1. En condiciones de urgencia es difícil visua-
tomía. lizar las características morfológicas del
5. El empleo de bario puede ocasionar mayor páncreas.
inflamación y reacción peritoneal en caso 2. La presencia de gas en las asas intestina-
de existir lesión duodenal. les y delgadas dificulta la visualización de
6. El estudio radiológico simple del abdomen la glándula.
no muestra signos específicos de lesión 3. No sirve para la evaluación del trauma
pancreática. duodenal.
4. Su principal utilidad radica en la evaluación
y seguimiento de las complicaciones del
TOMOGRAFÍA AXIAL trauma pancreático (por ej. absceso, pseu-
COMPUTADORIZADA (TAC) doquiste, colecciones peripancreáticas,
ascitis).
Es el estudio de preferencia pero teniendo en
mente que consume tiempo e incrementa los
costos y que no siempre se encuentra dispo- LAVADO PERITONEAL
nible. La TAC debe ordenarse sólamente en DIAGNÓSTICO (LPD)
pacientes que no tienen indicación de laparo-
tomía y bajo las siguientes precisiones: Aunque el lavado peritoneal se ha empleado
tanto en el trauma cerrado abdominal como

330
CAPÍTULO XXXII: TRAUMA PANCREÁTICO Y DUODENAL

en el penetrante, su mayor utilidad ha sido en EVALUACIÓN INTRAOPERATORIA


el primero:
El cirujano debe observar los tres principios
1. El LPD ha demostrado una sensibilidad alta básicos de la laparotomía en trauma:
para la detección de lesiones de otros ór-
ganos asociadas con trauma pancreático 1. Control de la hemorragia.
duodenal. 2. Control de la contaminación.
2. Tiene poco utilidad en la detección de las 3. Evaluación y tratamiento de lesiones es-
lesiones retroperitoneales y por tanto su pecíficas.
empleo en el diagnóstico del trauma del
páncreas y el duodeno es muy limitado. La mayoría de las lesiones tanto del páncreas
3. El hallazgo de un LPD negativo no excluye como del duodeno se identifican durante la
en ningún caso la lesión de vísceras retro- laparotomía mediante la exploración intraope-
peritoneales, particularmente del páncreas ratoria de todos los órganos.
y duodeno.
4. El hallazgo de valores altos de amilasa en Colangiografía intraoperatoria. Es una he-
el LPD puede ser sugestivo de lesión pan- rramienta sencilla y fácil de emplear en pacien-
creática o duodenal, aunque la perforación tes con sospecha de lesión del árbol biliar.
de otro segmento intestinal puede también
producir tal elevación enzimática. Pancreatografía intraoperatoria. Es necesa-
rio establecer la integridad del conducto pan-
creático principal (canal de Wirsung) para la
COLANGIOPANCREATOGRAFÍA clasificación de las lesiones pancreáticas. Aun-
que en muchos casos la lesión puede diag-
RETROGRADA ENDOSCÓPICA nosticarse por inspección directa, en otros es
(CPRE) necesaria la pancreatografía intraoperatoria,
bien sea por canulación del conducto a través
Su objetivo es establecer la integridad del con- de la ampolla de Vater o por canulación retró-
ducto pancreático principal. Por razones del grada mediante sección de la cola del
tiempo que requiere y de la laboriosidad del páncreas.
procedimiento, su valor en trauma es muy li-
mitado:
RESONANCIA NUCLEAR
1. La CPRE sólo está indicada en pacientes
en que no exista una indicación absoluta MAGNÉTICA (RNM)
de laparotomía.
2. Puede tener utilidad en casos selecciona- Parece tener papel en el diagnóstico de lesio-
dos para establecer la integridad y delinear nes pancreáticas severas en las cuales se
la anatomía del conducto pancreático. sospecha compromiso ductal y permite la vi-
3. Su mayor valor reside en la evaluación y sualización de los canales biliares (colangio-
seguimiento de las complicaciones deriva- resonancia).
das del traumatismo pancreático.
4. Es un procedimiento que no está libre de Su principal utilidad en la actualidad está en
complicaciones. el diagnóstico de las complicaciones del trau-
ma pancreático.

331
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CLASIFICACIÓN DE LAS LESIONES


PANCREÁTICAS
La American Association for the Surgery of
Trauma ha unificado las clasificaciones de las
lesiones de los distintos órganos en la que se
ha denominado Organ Injury Scaling (OIS),
que para el páncreas es la siguiente:

ESCALA DE LESIONES DEL PÁNCREAS

GRADO DESCRIPCIÓN DE LA LESIÓN ICD-9 AIS 90


I Hematoma Contusión menor sin lesión ductal. Laceración superficial sin lesión ductal. 863.81/84 22
Laceración
II Hematoma Contusión mayor sin lesión ductal o pérdida de tejido 863.81/84 23
Laceración Laceración mayor sin lesión ductal o pérdida de tejido
III Laceración Sección distal o lesión de parénquima y del conducto 863.92/94 3
IV Laceración Sección proximal o lesión que compromete la ampolla 863.91 4
V Laceración Ruptura masiva de la cabeza del páncreas 863.91 5

TRATAMIENTO DE LAS LESIONES neral, entre las cuales se debe incluir nutri-
PANCREÁTICAS ción parenteral.

La mayoría puede tratarse con procedimientos GRADO II


simples y aun en pacientes severamente lesio-
nados se debe escoger los procedimientos Los principios son similares a los del grado I.
que reporten la menor incidencia de morbilidad Debido al mayor tamaño de la lesión debe te-
y mortalidad operatoria. nerse especial cuidado en excluir afección del
conducto pancreático.
GRADO I
La incidencia de pancreatitis y fístulas puede
Los principios que rigen el manejo de este ser mayor que en las lesiones del grado I, pero
grado de lesión son: el pronóstico de tales complicaciones conti-
• Hemostasia. núa siendo favorable.
• Mínimo desbridamiento.
• Exclusión de lesión ductal. GRADO III
• Drenaje.
La laceración o sección del páncreas, con com-
La aparición de pancreatitis postoperatoria o promiso ductal que ocurre a la izquierda de los
de fístula pancreática es de buen pronóstico vasos mesentéricos, se trata con una pancrea-
y requiere sólamente medidas de soporte ge- tectomía distal con o sin esplenectomía.

332
CAPÍTULO XXXII: TRAUMA PANCREÁTICO Y DUODENAL

GRADO IV GRADO V

Las lesiones de este grado plantean un proble- La lesión masiva de la cabeza del páncreas,
ma más complejo. Usualmente se acompañan asociada o no a lesión duodenal, particular-
de heridas vasculares y por lo tanto la priori- mente en el trauma penetrante, se acompaña
dad es la hemostasia. frecuentemente de lesiones severas de los
grandes vasos retroperitoneales (aorta, vena
Cuando existe una lesión nítida se puede rea- cava, vasos mesentéricos y vena porta) con
lizar una pancreatoyeyunostomía a un asa en alta mortalidad operatoria.
Y de Roux.
El objetivo en el manejo de las heridas de esta
Cuando existe una lesión estrellada de la ca- magnitud es hacer hemostasia y drenar las le-
beza del páncreas, que no se extiende poste- siones pancreáticas en los pacientes inesta-
riormente, se realiza hemostasia y el drenaje bles. En los pacientes estables estaría indica-
de la lesión. da probablemente la pancreatoduodenectomía.

El empleo de la pancreatoduodenectomía en Sin embargo, antes de emprender la pancrea-


este tipo de heridas suele tener un alto índice toduodenectomía, se debe contemplar proce-
de complicaciones y mortalidad, aun en manos dimientos menos radicales como derivación
experimentadas. El objetivo es entonces lograr duodenal (diverticulización, exclusión pilórica),
hemostasia completa y drenaje suficiente con resecciones segmentarias del duodeno, dre-
el fin de permitir la recuperación del paciente naje amplio de las lesiones pancreáticas o
del trauma inicial, y en caso de persistir una pancreatoyeyunostomía.
fístula pancreática hacer una reintervención
que permita realizar un drenaje interno.
CLASIFICACIÓN DE LAS LESIONES
Cuando las lesiones grado IV del páncreas DUODENALES
se acompañan de lesiones duodenales, es
recomendable practicar procedimientos de La clasificación OIS para el duodeno es la si-
diverticulización o exclusión duodenal. guiente:

ESCALA DE LESIONES DEL DUODENO

GRADO DESCRIPCIÓN DE LA LESIÓN ICD-9 AIS 90


I Hematoma Sólo compromete una porción del duodeno. 863.21 2
Laceración Espesor parcial. No perforación. 3
II Hematoma Compromete más de una porción. 863.21 2
Laceración Ruptura <50% de la circunferencia. 863.31 4
III Laceración Ruptura del 50-75% de la circunferencia D2 o ruptura del 50-100% 863.31 4
de la circunferencia de D1, D3, D4. 863.31 4
IV Laceración Ruptura de más del 75% de la circunferencia D2. 863.31 5
Compromiso de la ampolla o colédoco distal. 5
V Laceración Ruptura masiva del complejo duodeno pancreático. 863.31 5
Vascular Desvascularización del duodeno. 5
D1, D2, D3, D4: segmentos del Duodeno.

333
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO DE LAS LESIONES más complejo. El tratamiento consiste en el


DUODENALES cierre meticuloso de la herida duodenal con
el fin de impedir fugas o comprometer la circu-
El manejo está fundamentado en tres lación duodenal.
elementos:
Cuando estas lesiones ocurren a nivel de D3
• Grado de la lesión. o D4, se debe efectuar la movilización comple-
• Localización de la lesión (D1-D4). ta del duodeno (maniobra de Kocher) para evi-
• Coexistencia de lesión pancreática. tar la lesión de los vasos mesentéricos.

La tendencia es hacia realizar procedimientos Cuando existe duda sobre la integridad del re-
simples. De hecho, la mayoría de las lesiones paro realizado es conveniente realizar un par-
duodenales pueden manejarse con procedi- che seroso con asa yeyunal.
mientos sencillos (80%), y otros de mayor
complejidad se reservan para las lesiones gra- Se han identificado algunos factores de riesgo
ves (20%). para fístula duodenal en pacientes con lesio-
nes de este órgano: shock pre o intraoperato-
En el manejo de las lesiones del duodeno co- rio, Índice de Trauma Abdominal (ATI) >25, o
bra plena vigencia el principio del manejo del lesiones asociadas de colon, páncreas o va-
trauma de “ no hacer daño” adicional. sos mesentéricos.

GRADO I La diverticulización duodenal consiste en la rea-


lización de antrectomía, colocación de una son-
Los hematomas intramurales que afectan a da de duodenostomía, drenaje biliar en caso
una sola porción del duodeno son de tal ta- necesario y reconstrucción de la continuidad
maño que pueden conducir a obstrucción, la intestinal con una gastroyeyunostomía (Berne).
cual suele responder al manejo expectante.
GRADO IV
GRADO II
Las heridas que afectan a más de 50% de la
Los hematomas que afectan a más de una circunferencia de la segunda porción duodenal
porción duodenal se manejan igual que las se pueden reparar primariamente siempre y
lesiones del grado I. También se prefiere ma- cuando no exista compromiso de la circulación
nejo conservador, con succión nasogástrica y duodenal y se haya descartado lesión de la
soporte nutricional parenteral. ampolla de Vater.

Las laceraciones que comprometen todo el es- También aplican las consideraciones previas
pesor de la pared y que interesan menos de que pueden indicar la realización de un proce-
50% de la circunferencia duodenal, se tratan dimiento de derivación duodenal: exclusión
con cierre primario, sin ningún tipo de drenaje. pilórica o diverticulización duodenal.

GRADO III En caso de coexistir lesión de la ampolla, del


duodeno y de la cabeza del páncreas, el pro-
Las lesiones que comprometen mas de 50% cedimiento de Whipple (pancreatoduode-
de la circunferencia duodenal son de manejo nectomía) podría ser el indicado.

334
CAPÍTULO XXXII: TRAUMA PANCREÁTICO Y DUODENAL

Los beneficios de la cirugía de “control de da- 5. Feliciano DV, Martin TD, Cruse PA, et al. Mana-
ños” (control de la hemorragia y de la conta- gement of combined pancreatoduodenal injuries.
minación), con traslado precoz a la unidad de Ann Surg 1987; 2056:673-680.
6. Lucas CE, Ledgerwood AM. Injuries to the stomach,
cuidado intensivo para la corrección de la aci-
duodenum, pancreas small bowell, colon and
dosis metabólica, la hipotermia y la coagulo- rectum. En: American College of Surgeons ACS
patía resultantes del trauma y finalmente una Surgery. Editado por DW Wilmore, LY Cheung, AH
reintervención “electiva” para el reparo defini- Harken, NJ Soper. Web Med. New York, 2002.
tivo de las heridas, deben ser siempre consi- 7. Nirula R, Velmahos GC, Demetriades D. Magnetic
derados como una alternativa en los pacien- resonance cholangiopancreatography in pancrea-
tes severamente lesionados. tic trauma: a new diagnostic modality? J Trauma
1999; 47:585-587.
8. Ospina JA, Chica C, Cabal AM. Indices de severi-
GRADO V
dad del trauma y la enfermedad. En: Cuidado Inten-
sivo y Trauma. Editado por CA Ordoñez, R Ferrada,
La lesión masiva pancreático-duodenal se R Buitrago . Editorial Distribuna. Bogotá, 2002.
acompaña de altas cifras de mortalidad intra- 9. Patiño JF. Trauma del páncreas y el duodeno. En:
operatoria por la coexistencia de lesiones vas- Lecciones de Cirugía. Por JF Patiño. Editorial Mé-
culares mayores El manejo usualmente re- dica Panamericana. Bogotá-Buenos aires, 2001.
quiere pancreatoduodenectomía. 10. Patton JH, Fabian TC. Complex pancreatic inju-
ries. Surg Clin North Am 1996; 76:783-795.
11. Rozycki GS. Abdominal ultrasonography in trau-
ma. Surg Clin North Am 1995; 75:175-191.
LECTURAS RECOMENDADAS 12. Snyder WH, Weigelt JA, Watkins WL, Bietz DS.
The surgical management of duodenal trauma.
1. Aristizabal H, Constain A. Ramírez W. Trauma Arch Surg 2000; 115:422- 429.
Pancreatoduodenal. En Manual de Normas y Pro- 13. Timaran H, Martínez O, Ospina JA. Prognostic
cedimientos en Trauma. JM Restrepo (Ed). Edito- factors and management of civilian penetrating
rial Universidad de Antioquia. Medellín, 2001 duodenal trauma. J Trauma 1999; 47:330-335.
2. Asensio JA, Feliciano DV, Britt LD, Kertein L. 14. Vaughan GH, Frazier OH, Graham DY, et al. The
Management of duodenal pancreatic injuries. Curr use of pyloric exclusion in the management of
Probl Surg 1993; 30:1021-1100. severe duodenal injuries. Am J Surg 1977;
3. Asensio JA, Demetriades D, Hampeter DE, et al. 134:785-790.
Management of pancreatic injuries. Curr Probl 15. Weigelt JA. Duodenal injuries. Surg Clin North Am
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4. Asensio JA, Stewart BM, Demetriades D. Dude- 16. Wilson RF. Injury to the pancreas and duodenum.
num. En: The textbook of Penetrating Trauma. En: Management of Trauma: Pitfalls and Practice.
Ivatury RR, G Cayten C (eds.). Williams and Editado por RF Wilson, JA Walt JA. Williams &
Wilkins. Baltimore, 1999. Wilkins. Baltimore, 1996.

335
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXXIII

Trauma por explosiones y bombas

Ricardo Uribe Moreno, MD


Jefe, Servicio de Urgencias y
Grupo de Trauma Cirugía de Emergencia
Hospital Militar Central
Bogotá

INTRODUCCIÓN

D urante las últimas décadas, los atenta-


dos terroristas se han incrementado en
el mundo, y el terrorismo es tan amenazador
de aire a velocidades tan altas como 400-600
m/seg, creando una fase de hiperpresión es-
tática y generando una onda expansiva que
como la guerra del futuro para la raza huma- avanza disipando la energía en función de la
na. El común denominador es el uso de la distancia.
violencia con el fin de obtener metas políti-
cas, ideológicas o religiosas mediante intimi- Los factores que gobiernan la hiperpresión y
dación, coerción y miedo, y casi ninguna na- la magnitud de la onda explosiva y que se re-
ción ha sido inmune a este fenómeno. lacionan con la severidad de las lesiones que
ocasionan son:
La detonación de artefactos explosivos es uno
de los métodos ampliamente utilizados para • Cantidad y tipo de explosivo.
realizar atentados terroristas, porque originan • Medio ambiente circundante.
un elevado número de víctimas, destrucción • Distancia desde el centro de la explosión.
material y el colapso de los sistemas de sa-
lud. La extensión de las lesiones depende del pico
de presión, su duración y el número de repeti-
La fisiopatología en este tipo de trauma ha ciones (reflexiones de la onda), especialmen-
sido estudiada y definida, y se hace cada día te cuando el evento ocurre en espacios ce-
más importante que el personal de salud pue- rrados.
da reconocer, implementar y actuar en forma
eficiente cuando ocurra una explosión. Se han descrito cuatro lesiones principales
que afectan a las víctimas de una explosión:

¿QUÉ ES UNA EXPLOSIÓN? Lesión primaria. Ocurre cuando la onda atra-


viesa al sujeto que, como organismo vivo, pre-
Es un evento físico-químico que resulta de la senta diferentes densidades con interfaces
liberación súbita y violenta de energía al de- aire-fluido y sólido-fluido. El desplazamiento
tonar una mezcla explosiva. La energía libe- de la onda de un medio de mayor densidad a
rada origina movimiento de grandes masas otro de menor densidad, origina aumento en

336
CAPÍTULO XXXIII: TRAUMA POR EXPLOSIONES Y BOMBAS

la tensión local, lo que produce estallidos, im- Fractura y dislocación de huesecillos: las le-
plosiones y destrucción de células y tejidos. siones más comunes son fractura del mango
Esto explica por que la explosión compromete del martillo y dislocación del estribo. Esto pue-
principalmente órganos que contienen gas en de originar sordera parcial o permanente, tinni-
su interior (oído, pulmón tracto gastrointes- tus y vértigo.
tinal).
Sistema pulmonar: responsable de la mayor
Lesión secundaria. Se presenta cuando la morbilidad y mortalidad en estos pacientes.
onda dinámica pone en movimiento diversos La onda explosiva genera ruptura de alvéolos,
objetos y fragmentos que se convierten en pro- disrupción perivascular y peribronquial con he-
yectiles y causan trauma penetrante. El gra- morragias alveolares, colapso de unidades
do de penetración depende de la masa y la ventilatorias, alteraciones que llevan a hipoxia
distancia a la que se encuentre la víctima. e insuficiencia ventilatoria aguda. Debido a la
disrupción alveolar y vascular pueden origi-
Lesión terciaria. Esta lesión se produce por narse fístulas alvéolo-venosas que producen
el desplazamiento de la víctima cuando es im- embolismo aéreo, hecho que incrementa la
pactada por la onda explosiva, haciéndola mortalidad. La disrupción de la pleura y del
chocar contra otras estructuras y causándole pulmón origina neumotórax, que de no ser
múltiples lesiones. La magnitud de éstas de- reconocido en forma precoz puede evolucio-
pende de la aceleración alcanzada y del efecto nar a neumotórax a tensión, colapso vascular
de desaceleración al impacto. y muerte.

Lesiones mixtas. Otro tipo de lesiones que Con la anterior consideración, es recomenda-
ocurren en las víctimas por explosión son: ble el paso de un tubo de tórax en forma profi-
láctica en pacientes con lesión pulmonar por
• Quemaduras flash. onda explosiva. Las víctimas con lesión pul-
• Quemaduras por llama. monar desarrollan síndrome de dificultad res-
• Inhalación de humo y gases tóxicos. piratoria del adulto (SDRA) en las prime-
• Síndrome de aplastamiento. ras 24-48 horas. Típicamente, las radiografías
• Estrés post traumático. muestran un patrón de infiltrados en ala de
mariposa o infiltrados difusos denominados
“tormenta de nieve”, que reflejan el grado de
LESIONES PRIMARIAS hemorragia y contusión pulmonar.
Las lesiones primarias comprometen princi-
palmente órganos que contienen gas. Tracto gastrointestinal: las lesiones en este
sistema no son tan frecuentes; el modo de
Sistema auditivo: el efecto de la alta presión presentación corresponde a hemorragias in-
sobre el oído origina perforación del tímpano, testinales, hemorragias en el mesenterio y, en
generalmente de la parte antero-inferior de la algunas ocasiones, perforación a nivel de cie-
pars tensa, hallazgo que debe buscarse en go, colon o íleon distal (debido a su alto con-
todas las víctimas. En 80% de los casos la tenido de gas). Las perforaciones general-
lesión cicatriza en forma espontánea. mente se presentan 24-48 horas después de
la explosión, por lo cual se debe mantener un
Alteraciones cocleares: ruptura del órgano de alto índice de sospecha en este tipo de pa-
Corti. cientes.

337
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Amputaciones traumáticas: las amputaciones ción. El personal tiene las siguientes res-
traumáticas son un indicador de mal pronós- ponsabilidades:
tico. En experiencias como las de Israel, la
amputación traumática se relacionó con una a. Establecer el número de víctimas.
tasa de mortalidad inmediata hasta de 11%. b. Categorizar el tipo y la gravedad de las
lesiones.
Causas de muerte inmediata: durante el aten- c. Reanimación de los casos críticos.
tado contra el DAS en Colombia, en 42 infor- d. Definir quiénes deben ser remitidos y a
mes de autopsia se encontraró estallido aór- qué tipo de hospital.
tico, laceraciones cardiacas, contusión pulmo- e. Definir el método de transporte.
nar masiva, ruptura de tráquea, fracturas se-
veras de alta conminución, compromiso de co- La experiencia Israelí, la cual ha sido com-
lumna y pelvis y amputaciones traumáticas. probada en nuestro medio, describe que una
En otros reportes (Frykberg 2002) se encon- vez sucede el evento se observan cuatro
tró que la lesión del sistema nervioso central fases:
era la más común.
1. Fase de caos: corresponde a los prime-
ros 25 minutos; se caracteriza por falta de
ATENCIÓN PREHOSPITALARIA orden y liderazgo. Los pacientes que pue-
den transportarse por si mismos se dirigen
Este tipo de atentados produce un gran nú- a los hospitales más cercanos, lo cual hace
mero de víctimas que sobrepasa la capaci- que los centros reciban primero los pacien-
dad de los sistemas médicos de atención. La tes con lesiones menos severas, congestio-
clave para obtener la mínima pérdida de vi- nando los servicios de urgencias.
das y disminuir la morbilidad se encuentra en 2. Fase de organización: probablemente la
la clasificación o triage que se realice en la más importante para el manejo de los pa-
escena, con el fin de identificar aquellos pa- cientes con lesiones graves. Usualmente du-
cientes que deben ser evacuados en forma ra 60 minutos, dependiendo de la magnitud
urgente a los centros médicos especializados. del evento. Las autoridades médicas, pa-
Tradicionalmente, existen dos métodos en la ramédicas y policiales aseguran el área, rea-
atención primaria de desastres que se han lizan rescate, triage y evacuación de acuer-
extrapolado a este tipo de situación: do con el grado de severidad de las víctimas.
1. Transporte inmediato a los centros hos- 3. Fase de extricación y evacuación: esta
pitalarios: es el más común; el triage se fase puede durar de 100 a 180 minutos,
realiza en el centro hospitalario al ingreso según el número de víctimas que se en-
de los pacientes. Tiene como desventaja cuentren atrapadas bajo los escombros y
el desconocimiento de las entidades recep- la dificultad en su rescate.
toras sobre el número y el tipo de pacientes.
4. Fase tardía: termina cuando se ha estable-
2. Triage y reanimación en la escena: se cido que no hay más víctimas por identifi-
requiere la presencia de personal médico car, y generalmente dura de 24 a 48 horas.
y paramédico especializado en el manejo
de la emergencia. Debe contar con adecua- Los dos métodos de atención primaria se com-
dos sistemas de transporte y de comunica- plementan, y realmente el triage y la reani-

338
CAPÍTULO XXXIII: TRAUMA POR EXPLOSIONES Y BOMBAS

mación en la escena sólo se cumplen a partir • Pacientes con sospecha de lesión prima-
de la segunda fase. ria a nivel pulmonar o gastrointestinal.
• Pacientes con trauma craneoencefálico o
raquimedular.
ATENCIÓN EN LOS CENTROS • Pacientes con quemaduras.
HOSPITALARIOS • Pacientes con agitación psicomotora.

Triage. Debe ser realizado en el sitio de arri- Esta clasificación permite definir qué pacien-
bo de las ambulancias, por el personal médi- tes requieren cirugía inmediata, cuáles deben
co más experimentado en el manejo de emer- ir a una unidad de cuidado intensivo, en quié-
gencias, por lo general un cirujano. Tradicio- nes se debe hacer interconsulta con otras es-
nalmente, los pacientes se han clasificado en pecialidades y/o cuáles deben ser trasladados
cuatro categorías: a otros centros, con el fin de optimizar el uso
de los recursos tanto físicos como humanos
1. Pacientes con trauma severo, que requie- del centro hospitalario.
ren hospitalización.
2. Pacientes con trauma leve, que requieren Los procedimientos prioritarios de reanimación
hospitalización por riesgo de complicacio- incluyen:
nes o condiciones asociadas.
3. Pacientes con trauma leve que no requie- 1. Manejo de vía aérea y ventilación mecánica.
ren hospitalización. 2. Toracostomías bilaterales profilácticas en
4. Pacientes no recuperables. pacientes con insuficiencia ventilatoria agu-
da y sospecha de lesión primaria pulmonar.
Nuestra institución, centro receptor de trauma 3. Inmunización contra tétanos.
militar, clasifica los pacientes en dos catego- 4. Ecografía abdominal.
rías: pacientes urgentes y no urgentes. Esto 5. TAC en pacientes con sospecha de trau-
ha permitido la valoración de todas las vícti- ma craneoencefálico.
mas que ingresan y mejorar la distribución por
áreas en urgencias, evitando la congestión y
utilizando en forma óptima los recursos. PACIENTES NO URGENTES

Es el grupo de pacientes hemodinámicamente


PACIENTES URGENTES estables que no requieren manejo médico o
Los pacientes clasificados como urgentes son quirúrgico avanzado en las siguientes horas.
valorados y reanimados en las salas de reani- Son valorados por médicos de urgencias y por
mación o de trauma de acuerdo con el proto- el resto del personal médico disponible en las
colo ATLS del Colegio Americano de Ciruja- áreas de observación, definiendo aquellos que
nos. Para este tipo de evento se clasifican así: deben permanecer hospitalizados para eva-
luación ulterior y aquellos que pueden ser
• Pacientes con insuficiencia ventilatoria o dados de alta o remitidos a centros de menor
inestabilidad hemodinámica. complejidad.
• Pacientes con lesión secundaria penetrante
de tórax, abdomen y fracturas con sospe- Todos los pacientes víctimas de atentados
cha de lesión vascular, o amputaciones terroristas deben tener los siguientes exáme-
traumáticas. nes antes de ser dados de alta:

339
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Valoración por oftalmología. a time of fear. Arch Intern Med 2002; 162:1809-
• Valoración por otorrinolaringología. 1813.
• Profilaxis antitetánica. 7. Hirshberg B, Oppenheim-Eden A, Pizov R,
Sklair-Levy M. Recovery from blast lung injury.
• Heridas lavadas, desbridadas y manejadas
Chest 1999; 116:1683-1688.
en forma abierta. 8. Hogan D. Waeckerle J, Dire D. Emergency
• Valoración y consejería por psiquiatría. Department impact of the Oklahoma City ter-
rorist bombing. Ann Emerg Medicine 1999;
Colombia, país expuesto a atentados terroris- 34:160-167.
tas, debe desarrollar en sus centros hospita- 9. Leibovici D, Stein M, Gofrit ON, Shapira SC,
larios, de acuerdo a sus recursos, un plan de Noga Y. Blast injuries: bus vs. open air bomb-
emergencia para la atención de desastres que ing. A comparative study of open injuries in sur-
vivors open-air versus confined-space explo-
debe ser probado por lo menos con dos simu-
sions. J Trauma 1996; 41:1030-1035.
lacros al año. 10. Meade P, Mirocha J. Civilian landmine injuries
in Sri Lanka. J Trauma 2000; 48:735-739.
11. North C, Nixon S, Shariat S, et al. Psychiatric
disorders among survivors of the Oklahoma
LECTURAS RECOMENDADAS City bombing. JAMA 1999; 282:755-762.
12. Paran H, Neufel D, Shwartz I, et al. Perfora-
1. Biancolini C, Del Bosco C. Argentine Jewish tion of terminal ileum induced by blast injury. J
community institution bomb Explosion. J Trauma Trauma 1996; 40:472-475.
1999; 47:728-732. 13. Roberto M, Hamernik RP. Damage to the au-
2. Cernak I, Savic J, Ignjatovic D, Jevtic M. Blast ditory system associated with acute blast
injury from explosive munitions. J Trauma 1999; trauma. Ann Otol Rhinol Laryngol 1989;
47:96-103. 140:23-34.
3. Cernak I, Savic J, Zunic G. Recognizing, scoring 14. Sabri A, Erler K, Gur E, Solakoglu C. Below-
and predicting blast injuries. World J Surg 1999; knee amputations as a result of land-mine in-
23:44-53. juries. J Trauma 1999; 47:724-727.
4. Cooper GJ, Maynard RL, Cross NL, Hill JF. 15. Stein M, Hirshberg A. Medical consequences of
Casualties from terrorism bombings. J Trauma terrorism. Surg Clin North Am 1999; 79:1537-1552.
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5. Frykberg ER. Medical management of disasters gunshot wounds and shrapnel-blast injuries in Is-
and mass casualties from terrorist bombings: how rael. Surg Clin North Am 2002; 82:237-244.
can we cope? J Trauma 2002; 53:201-212. 17. Varkey P, Poland GA, Cockerill FR 3rd, Smith TF,
6. Hassett AL, Sigal LH. Unforeseen consequences Hagen PT. Confronting bioterrorism: physicians on
of terrorism: medically unexplained symptoms in the front line. Mayo Clin Proc 2002; 77:661-672.

340
CAPÍTULO XXXIV: TRAUMA OCULAR

CAPÍTULO XXXIV

Trauma ocular

Giovanni Castaño, MD
Profesor Asistente y Jefe de la Unidad de Oftalmología
Facultad de Medicina, Pontificia Universidad Javeriana
y Hospital Universitario de San Ignacio.

Iván Martínez
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina

U na causa de consulta frecuente a los ser-


vicios de urgencia es el trauma ocular, el
cual se acompaña de comprensible ansiedad
de 10 años representan 4% del total de los
pacientes. La mitad (50%) de las lesiones ocu-
rren durante el trabajo, 25% durante juegos
por parte del paciente. infantiles y 5% al realizar actividad deportiva.

La valoración del individuo con trauma ocular


requiere un examen rápido, completo y CUADRO CLÍNICO
secuencial.
Es necesario obtener durante el interrogato-
rio inicial datos de enfermedad ocular previa,
características del trauma (con especial con-
EPIDEMIOLOGÍA sideración al mecanismo) y la aparición de
síntomas inmediatos después de la lesión.
El trauma ocular es la causa principal de ce-
guera monoocular en los Estados Unidos. Es El examen del ojo obtiene mejores resultados
la tercera causa de hospitalización en los ser- si se hace de fuera hacía adentro, empezan-
vicios de oftalmología y la segunda de compro- do por la conjuntiva para terminar en la retina.
miso visual después de las cataratas. Aproxi- El examen sistemático permite evaluar la fun-
madamente 48% de las lesiones son contun- ción y la estructura ocular de forma apropiada.
dentes y 48% penetrantes. Afecta en un por-
centaje mayor al sexo masculino (87%), con En la siguiente tabla se muestra lo que se debe
edad promedio de 30 años. Los niños menores buscar durante la evaluación del ojo.

341
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Estructura Alteración
Agudeza visual Disminución súbita. Registro completo
Párpados Edema, equimosis, quemaduras, laceraciones, ptosis, cuerpos extraños
Reborde orbitario Deformidad, crepitación
Globo ocular Desplazamiento anterior, desplazamiento posterior o inferior
Pupila Asimetría, respuesta a estímulos luminosos
Córnea Opacidad, ulceraciones, cuerpos extraños
Conjuntiva Quemosis, enfisema subconjuntival, hemorragia subconjuntival, cuerpos
extraños
Cámara anterior Hifema
Iris Iridodiálisis, iridodensis
Cristalino Desplazamiento anterior, dislocación, luxación
Vítreo Cuerpo extraño, sangrado
Retina Hemorragia, desprendimiento

PÁRPADOS con fluoresceína. La causa de la abrasión cór-


neal es generalmente un cuerpo extraño ubi-
Cuando se encuentran laceraciones en el pár- cados en el párpado.
pado se debe investigar compromiso de las
estructuras oculares subyacentes. La lacera- El manejo consiste en retirar el cuerpo extraño,
ción del párpado superior de forma horizontal utilizar antibiótico y ciclopejico tópico y cubrir
y sin lesión evidente del músculo elevador del el ojo con un parche ocular. La abrasión debe
párpado, puede ser suturada por el médico ser examinada por el oftalmólogo cada 24 ho-
de urgencias. Se usan suturas finas 6-0. ras hasta que cicatrice totalmente. Usualmen-
te la abrasión corneal limpia y no infectada
Las siguientes lesiones requieren de manejo sana en dos a tres días.
por parte del oftalmólogo:
1. Aquellas que incluyan el canto interno por
la posible sección de canalículos lagrimales. CUERPOS EXTRAÑOS
2. Laceraciones profundas con compromiso
del elevador de párpado superior. La mayoría de los cuerpos extraños pueden
3. Compromiso del borde libre de los párpados. ser removidos con irrigación del ojo. Si el cuer-
po extraño se encuentra impactado es conve-
niente remitir al paciente al oftalmólogo. Des-
CÓRNEA pués del retiro se trata la abrasión córneal que
generalmente queda como resultado del ac-
ABRASIÓN CÓRNEAL cidente.

Los síntomas de abrasión córneal son dolor, CÁMARA ANTERIOR


sensación de cuerpo extraño que se agrava
con el movimiento del párpado y fotofobia. El Hifema es la presencia de sangre en la cáma-
epitelio córneal que ha sido lesionado se tiñe ra anterior del ojo. La estrategia para tratar el

342
CAPÍTULO XXXIV: TRAUMA OCULAR

hifema debe estar conducida a evitar el resan- RETINA


grado y a disminuir la presión intraocular.
El trauma directo al globo ocular puede pro-
El resangrado ocurre tres a siete días des- ducir desprendimiento de retina. Los síntomas
pués del trauma. Es necesario cubrir el ojo y incluyen defectos del campo visual, visión de
recomendar reposo absoluto. luces centelleantes y sensación de tener una
cortina que oscurece la visión. La remisión ur-
Siete por ciento de los pacientes con hifema gente al oftalmólogo es perentoria.
desarrollan glaucoma. El manejo es similar al
utilizado en el glaucoma de ángulo cerrado.
(Ver guía de Glaucoma en esta misma serie). GLOBO OCULAR
Todos los pacientes con sangrado en la cáma- Cuando el globo ocular se rompe, la agudeza
ra anterior del ojo deben ser vistos por el of- visual se disminuye súbitamente. Los sínto-
talmólogo. mas incluyen:

• Dolor agudo.
IRIS • Visión borrosa aguda.
• Evidencia del sitio de la ruptura.
IRIDOCICLITIS TRAUMÁTICA • Disminución de la agudeza visual.
• Hipotonía ocular.
El trauma ocular cerrado puede producir irri- • Cámara anterior panda o excesivamente
tación del iris y del cuerpo ciliar, que lleva a profunda en perforaciones posteriores.
inflamación de la cámara anterior del ojo. Los • Evidencia de protrusión o herniación del
síntomas se presentan 24-48 horas después contenido ocular: cristalino, iris, cuerpo
del trauma. Incluyen dolor, fotofobia y visión ciliar, vítreo.
borrosa. En el examen se encuentra ojo rojo, • Alteraciones pupilares.
pupila pequeña poco reactiva y reacción infla-
matoria en la cámara anterior. El manejo debe El manejo incluye oclusión no compresiva con
estar a cargo de un oftalmólogo. apósito, indicación de no aplicar anestesia tó-
pica ni analgésicos. Es conveniente suspender
la vía oral, utilizar antieméticos y laxantes para
CRISTALINO disminuir las consecuencias de la maniobra
de Valsalva y remitir rápidamente al especia-
El cristalino esta suspendido detrás del iris por lista.
fibras de la zonula que lo sostienen al cuerpo
ciliar. Con el trauma cerrado las zonula se pue-
de romper y dar como resultado subluxación FRACTURAS ORBITARIAS
o luxación completa del cristalino. El tratamien-
to no es urgente a menos que el cristalino luxa- Clínicamente pueden manifestarse por:
do produzca daño del epitelio córneal u obs- • Asimetría facial.
trucción del flujo del humor acuoso con glau- • Equimosis.
coma agudo de ángulo cerrado. • Dolor.
• Limitación de los movimientos oculares (por
atrapamiento muscular).

343
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Áreas de hiper o hipoanestesia infraorbita- continua con solución salina o lactato de Rin-
ria o de la porción dental superior. ger. Debe llamarse de inmediato al oftalmólo-
• Palpación de la fractura en el reborde go para que asume el cuidado del paciente.
orbitario.
• Diplopía en la mirada hacia abajo.
LECTURAS RECOMENDADAS
La tomografía axial computadorizada es el
examen diagnóstico de elección para descar- 1. Andreotti G, Lange JL, Brundage JF. The nature,
tar fracturas de la órbita. incidence, and impact of eye injuries among US
military personnel: implications for prevention. Arch
Ophthalmol 2001; 119:1693-7.
Su valoración y manejo debe ser multidiscipli-
2. Fulcher TP, McNab AA, Sullivan TJ. Clinical
nario por el probable compromiso de estruc- features and management of intraorbital foreign
turas vecinas (neurocirugía, cirugía maxilofa- bodies. Ophthalmology 2002; 109:494-500.
cial, otorrinolaringología). 3. Le Sage N, Verreault R, Rochette L. Efficacy of
eye patching for traumatic corneal abrasions: a
controlled clinical trial. Ann Emerg Med 2001;
LESIONES QUÍMICAS 38:129-34.
4. Liu D, Al Shail E. Retained orbital wooden foreign
body: a surgical technique and rationale.
Tanto los ácidos como los álcalis son capaces
Ophthalmology 2002; 109:393-9.
de causar una lesión grave del ojo. Los álcalis 5. Yamashita T, Uemara A, Uchino E, Doi N, Ohba
tienden a producir una lesión más severa. El N. Spontaneous closure of traumatic macular hole.
manejo inicial incluye irrigación abundante y Am J Ophthalmo. 2002; 133:230-5.

344
CAPÍTULO XXXV: TRAUMA PULMONAR

CAPÍTULO XXXV

Trauma pulmonar

Luis Gerardo García-Herreros, MD


Cirujano de Tórax
Hospital Central de la Policía
Bogotá

E l trauma del tórax es responsable del 25%


de las muertes por trauma cerrado. Las
lesiones por trauma cerrado tienen mayor mor-
1. Rápidamente letales: producen la muerte
en el instante o pocos minutos después.
2. Potencialmente letales: 50% de los pacien-
talidad que las causadas por trauma penetran- tes fallecen en pocas horas o en el curso
te, porque usualmente comprometen múltiples de pocos días por sepsis o falla orgánica
órganos. múltiple.
3. No necesariamente letales.
Aunque los pacientes con trauma cerrado y
penetrante comparten muchos principios, hay
que tener en cuenta algunas diferencias: MANEJO GENERAL
En el trauma cerrado:
DEL PACIENTE
• Hay fracturas costales múltiples (excepto CON TRAUMA PULMONAR
en niños).
• Puede haber hemotórax o neumotórax tar- El manejo debe ser individualizado, comen-
dío (>24 horas después del trauma). zando por una eficaz reanimación aplicando
• El trauma de la vía aérea superior se ma- el método ABC del ATLS del Colegio Ameri-
nifiesta como estenosis. cano de Cirujanos (American College of
• El trauma de la aorta torácica puede tener Surgeons).
manifestación tardía.
La vía aérea debe estar despejada y perma-
En el trauma penetrante: necer permeable; si la ventilación parece ina-
• Puede no haber fracturas costales. decuada, el paciente debe ser intubado y co-
• Hemotórax o neumotórax inmediato. locado en ventilación mecánica. Es muy im-
• El trauma de la vía aérea cursa con gran portante descartar rápidamente la presencia
escape aéreo. de neumotórax a tensión, hemotórax masivo,
• El trauma de los grandes vasos y del cora- taponamiento cardiaco o tórax inestable (ver
zón es exangüinante. la guía de Trauma de Tórax en esta misma
serie).
Las lesiones torácicas se clasifican en tres
grupos: La evaluación inicial, es global e incluye de-
terminación de los signos vitales y de la

345
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

perfusión de la piel, del estado de las venas Hay dos subgrupos en que se debe conside-
del cuello, la auscultación pulmonar y el exa- rar y emprender toracotomía de emergencia:
men abdominal. Se debe buscar, evaluar y
controlar la hemorragia mayor. Se debe prac- 1. Pacientes con severo deterioro cardiovas-
ticar una evaluación neurológica rápida (pu- cular post-traumático.
pilas, respuesta verbal y motora). 2. Pacientes en paro cardiaco reciente asocia-
do con trauma penetrante.
Se toman muestras para hemoclasificación y
solicitud de componentes sanguíneos. Se ca- Siempre hay que tener en cuenta que este es
nalizan dos venas antecubitales con catéteres un procedimiento formidable en un paciente
16G para una adecuada reposición del volu- moribundo, que sólo debe ser ejecutado por
men circulatorio con soluciones cristaloides un cirujano experto y en un centro que cuente
(SSN o lactato de Ringer). En este momento con las facilidades y equipos necesarios. La
debe obtenerse un estudio radiológico portá- mortalidad es muy alta.
til del tórax en posición A-P.

La siguiente es la gradación de la gravedad TRATAMIENTO ESPECÍFICO


en el trauma torácico mayor:
El trauma del parénquima pulmonar y de la
vía aérea puede resultar tanto del trauma pe-
CLASIFICACIÓN DE PACIENTES netrante como del trauma cerrado. Se presen-
MUY GRAVES tan tres tipos de lesión:

• Lesión mortal: ausencia de signos vitales 1. Contusión pulmonar.


durante el transporte y a su llegada al ser- 2. Ruptura pulmonar o laceración pulmonar.
vicio de urgencias. 3. Lesión traqueo-bronquial.
• Lesión fatal: signos vitales presentes duran-
te el transporte, pero ausentes a su llegada Contusión pulmonar. Es el tipo de lesión más
al servicio de urgencias. frecuente. Se caracteriza por un área de ocu-
• Estado preagónico: semiconsciente. Algún pación del espacio aéreo por sangre. Se aso-
pulso periférico presente. Ausencia de pre- cia con trauma penetrante o trauma cerrado
sión arterial. mayor. Hasta 90% de los pacientes con con-
• Shock profundo: consciente. Tensión arte- tusión pulmonar tienen otras alteraciones torá-
rial sistólica por debajo de 80 mmHg. cicas que incluyen fracturas costales (70%),
neumotórax (60%), hemotórax (40%) y frac-
tura de clavícula (10%). La tasa de mortalidad
CIRUGÍA DE EMERGENCIA asociada con contusión pulmonar es de 14-
20%.
Solamente 10-15% de los pacientes con trau-
ma pulmonar, requieren toracotomía de emer- Los síntomas incluyen dolor torácico y disnea.
gencia. Los pacientes en quienes se realiza En el examen físico se encuentra taquicardia,
este procedimiento por un trauma severo del taquipnea y estertores alveolares en el sitio
tórax exhiben una elevada mortalidad, como de la contusión. Frecuentemente cursan con
se describde en la guía Trauma de Tórax en hemoptisis leve, sin embargo ninguno de estos
esta misma serie. signos o síntomas es específico. La clave del

346
CAPÍTULO XXXV: TRAUMA PULMONAR

diagnóstico reside en la sospecha clínica ba- El tratamiento inicial consiste en toracostomía


sada en la historia y la descripción del meca- cerrada para lograr expansión pulmonar; si
nismo de la lesión. ésta no se logra, se hace necesaria la toraco-
tomía con el fin del reparo primario de la
Los cambios radiológicos aparecen seis a lesión.
ocho horas después del trauma. Se observa
una región de consolidación pulmonar, usual-
mente periférica, adyacente al área traumati- CIRUGÍA EN EL TRAUMA PULMONAR
zada sobre la pared del tórax.
Las lesiones pulmonares que requieren inter-
El tratamiento incluye terapia respiratoria y vención quirúrgica son generalmente el resul-
administración de oxígeno suplementario para tado de trauma penetrante. Se practica tracto-
mantener adecuados niveles de PaO2. La mía pulmonar con grapas para lograr el me-
administración de antibióticos profilácticos no nor grado de desvascularización.
ha demostrado beneficio en el tratamiento de
la contusión pulmonar. Pocas veces se requiere lobectomía o neumo-
nectomía. La lobectomía es necesaria cuan-
Laceración pulmonar. La laceración pulmo- do un lóbulo está completamente desvascula-
nar se caracteriza por disrupción de la pleura rizado o destruido.
visceral y del parénquima pulmonar; es más
común en el trauma penetrante, aunque pue-
de verse en trauma cerrado mayor.
LECTURAS RECOMENDADAS
En la radiografía de tórax se presenta como
hemoneumotórax y condensación pulmonar; 1. American College of Surgeons. ATLS, Programa
el hemotórax masivo es muy raro. Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi-
cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Colegio
Americano de Cirujanos. Chicago, 1997.
El tratamiento consiste en toracostomía cerra- 2. Cortés F., Buitrago F. Trauma de tórax. Rev Fac
da (tubo de tórax), oxígeno suplementario y Med 2001; 48:35-44.
terapia respiratoria. Se recomienda el uso de 3. Gasparri M, Karmy-Jones R, Kralovich KA, et al.
cefalosporina de primera generación como Pulmonary tractotomy versus lung resection: via-
profilaxis de la infección del espacio pleural. ble options in penetrating lung injury. J Trauma
2001; 51:1092-1095.
Lesión traqueo-bronquial. La lesión traqueo- 4. Kabon B, Waltl B, Leitgeb J, Kapral S, Zimpfer M.
bronquial con ruptura se produce usualmente First experience with fiberoptically directed wire-
por trauma penetrante con lesión directa de un guided endobronchial blockade in severe pulmo-
nary bleeding in an emergency setting. Chest
bronquio mayor (lobar, segmentario) o de la trá-
2001; 120:1399-1402.
quea. Resulta en colapso pulmonar ipsilateral,
5. Karmy-Jones R, Jurkovich GJ, Shatz DV, et al.
con neumotórax a tensión. En el trauma cerra- Management of traumatic lung injury: a Western
do puede existir también lesión traqueo-bron- Trauma Association Multicenter review. J Trauma
quial, la cual comúnmente se manifiesta como 2001; 51:1049-1053.
estenosis tardía del bronquio o de la tráquea. 6. Pape HC, Remmers D, Rice J, et al. Appraisal of
early evaluation of blunt chest trauma: development
El diagnóstico se establece mediante la iden- of a standardized scoring system for initial clinical
tificación broncoscópica de la lesión. decision making. J Trauma 2000; 49:496-504.

347
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

7. Rocco G, Allen M. Bronchial repair with pulmonary 9. Velmahos GC, Baker C, Demetriades D, et al.
preservation for severe blunt trauma. Thorac Lung-sparing surgery after penetrating trauma
Cardiovasc Surg 2001; 49:231-233. using tractotomy, partial lobectomy, and
8. Tapias L, ReyM. Trauma de tórax. Med UIS 1997; pneumonorrhaphy. Arch Surg 1999; 134:186-189.
11:210-218.

348
CAPÍTULO XXXVI: TRAUMA RAQUIMEDULAR

CAPÍTULO XXXVI

Trauma raquimedular

Enrique Jiménez Hakim, MD


Jefe Sección de Neurocirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

L a incidencia y el costo derivado del trau-


ma espinal se desconoce en Colombia,
pero las cifras de otros países son ilustrativas
mejorar la calidad de vida del paciente con
trauma espinal está plenamente justificada.

y posiblemente extrapolables en gran parte a El costo del tratamiento médico incluyendo


nuestro país. En Estados Unidos, Canadá y rehabilitación para un parapléjico es de 85.000
Australia, la incidencia es de 50, 15, y 22 ca- dólares, y para un cuadripléjico 120.000. A su
sos por millón de habitantes respectivamente. vez, el costo del cuidado de por vida que re-
Setenta y cinco por ciento son hombres. Esto quieren estos pacientes es de 210.000 y
se explica en parte debido al mayor uso del 570.000 dólares anuales para un parapléjico
alcohol y a la participación en actividades y y un cuadripléjico respectivamente.
deportes arriesgados. Cincuenta y tres por
ciento de los individuos están casados o tienen
alguna relación estable de pareja y el 64% se CAUSAS
encuentra empleado. Esto implica que el trau-
ma espinal tiene repercusiones graves sobre Las causas de trauma espinal en nuestro
la vida familiar y laboral del paciente. medio son varias. La más frecuente es el trau-
ma automovilístico, generalmente asociado a
El trauma espinal es más común en las noches la ingestión de alcohol. Estos dos factores
y madrugadas, nuevamente por factores epi- están presentes en por lo menos 50% de los
demiológicos de riesgo tales como el alcohol, casos de trauma espinal. Otras causas son
la violencia e inseguridad y los accidentes los accidentes industriales y de la construc-
automovilísticos. El costo de la atención del ción, los accidente deportivos, y el trauma
trauma espinal es inmenso. No existen cifras como resultado de la inseguridad: heridas
en nuestro medio, pero en Estados Unidos en cortopunzantes y heridas por arma de fuego.
un solo año el costo directo es de 3,4 billones
de dólares por atención y rehabilitación de es- El trauma espinal en gran parte es prevenible,
tos pacientes. El costo indirecto no es menor, conviene impulsar campañas de uso del cin-
2,2 billones de dólares, e implica lo que el turón de seguridad, uso prudente del alcohol,
paciente con trauma espinal deja de producir uso del casco en las construcciones e indus-
para sí mismo, su familia, y la sociedad como tria y por parte de motociclistas y ciclistas. De
secuela de las lesiones sufridas. De esto se igual forma es útil educar a la población
deduce que cualquier medida encaminada a general sobre cómo introducirse en el agua

349
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

(piscina, río) con los pies inicialmente (“feet compromiso de su estado de conciencia y su
first”) y no lanzándose de cabeza. interrogatorio es limitado, presenta un trauma
espinal mientras no se demuestre lo contrario.

MECANISMOS En el trauma espinal puede haber compromiso


de la medula espinal, de las raíces nerviosas
Existen cuatro mecanismos principales de o de ambas. Las manifestaciones clínicas co-
trauma espinal: rresponderán a las estructuras lesionadas.

1. Extensión. El examen neurológico es de gran importan-


2. Flexión. cia para determinar tanto en el paciente cons-
3. Rotación. ciente como en el inconsciente, si existe com-
4. Compresión vertical o carga axial. promiso neurológico de médula, de raíces ner-
viosas o de ambas, como resultado de trauma
Estos son movimientos tolerados normalmen- espinal; se debe valorar la fuerza, sensibilidad,
te por la columna y las estructuras nerviosas reflejos, compromiso de esfínteres y deformi-
espinales siempre y cuando se mantengan dad espinal.
dentro de rangos fisiológicos. De lo contrario
se presenta disrupción anatómica y lesión En el paciente consciente, un síntoma inequí-
estructural del continente (columna) y conte- voco de trauma en la columna vertebral es la
nido (médula - raíces nerviosas). Con frecuen- presencia de dolor espinal. En este, es relati-
cia en una sola lesión espinal intervienen dos vamente fácil determinar si existe trauma espi-
o más de los cuatro mecanismos anotados. nal, pues en el interrogatorio se obtendrá infor-
mación acerca del tipo de trauma, presencia
El trauma espinal producido por flexión forza- de dolor y síntomas de tipo neurológico tales
da es causa frecuente de lesión ósea, liga- como alteración motora, sensitiva o de esfín-
mentaria y de medula y raíces nerviosas. La teres. En el paciente inconsciente es necesa-
flexión forzada asociada o no a carga vertical rio prestar suma atención al examen físico
(axial) se presenta por ejemplo en casos de pues no se cuenta con el interrogatorio.
“clavados” en piscina o ríos pandos.
Las lesiones medulares pueden ser completas
La hiperextensión puede producir lesión espi- o incompletas. Estas últimas pueden manifes-
nal. En la hiperextensión se produce disminu- tarse a su vez como síndrome medular ante-
ción del espacio intraespinal. En pacientes de rior, central, posterior, o de hemisección medu-
edad avanzada en los cuales por cambios lar, este último conocido como síndrome de
degenerativos el espacio interior del canal Brown – Sequard. La sección medular com-
espinal está ya disminuido, la posibilidad de pleta se caracteriza por pérdida total de movi-
lesión de las estructuras contenidas dentro del miento, sensibilidad, reflejos y control de esfín-
canal espinal aumenta. teres. En su grado más extremo, el trauma
espinal se asocia a sección anatómica o fisio-
lógica de la medula espinal, con cuadro clínico
EXAMEN conocido como “shock espinal”. En el examen
se encuentra parálisis (paraplejia - cuadriple-
Todo paciente con trauma de cráneo severo jia), nivel de anestesia, arreflexia, ausencia de
o politraumatismo, especialmente si tiene función esfinteriana, y “shock neurogénico”

350
CAPÍTULO XXXVI: TRAUMA RAQUIMEDULAR

producido por desconexión del sistema sim- traumáticas. Opcionalmente en el paciente


pático (simpatectomía) y que se caracteriza con trauma de cráneo, cuando se tome TAC
por hipotensión arterial y bradicardia. Hacen cerebral, se puede aprovechar este estudio
parte de la lesión simpática vasodilatación, para realizar en forma complementaria cortes
pérdida de calor por esta razón e hipotermia. de TAC de las tres primeras vértebras cervi-
cales.

TRATAMIENTO INICIAL Y ESTUDIOS Las lesiones traumáticas de la columna que


IMAGENOLÓGICOS Y FUNCIONALES produzcan desplazamiento anormal de sus
elementos requieren colocar de nuevo en su
En el tratamiento de los pacientes con trauma sitio las estructuras, es decir, reducción. La
espinal se debe seguir un protocolo secuen- inmovilización y reducción de lesiones espina-
cial que incluye: les cervicales puede hacerse mediante cual-
quiera de los métodos disponibles. Uno de
1. Inmovilización desde el sitio y momento del estos métodos es la colocación de halo cra-
accidente. neano que tracciona el cráneo e indirectamen-
2. Diagnóstico clínico e imagenológico. te la columna cervical, alineando las vértebras.
3. Intervención farmacológica para disminuir
la severidad de la lesión inicial y las se- La resonancia magnética (magnetic reso-
cuelas neurológicas. nance imaging, MRI) es un excelente método
4. Reducción de luxaciones, descompresión diagnóstico de las lesiones espinales traumá-
de tejido nervioso si hay fragmentos de ticas, complementada con la tomografía axial
hueso, disco, ligamentos, etc. sobre raíces computadorizada (TAC). La TAC muestra en
o medula espinal. forma más precisa que la MRI las estructuras
5. Fijación espinal en caso de inestabilidad. óseas; con medio de contraste intratecal, la
6. Rehabilitación del paciente. TAC delimita en forma precisa el contenido
espinal (médula y raíces). Las reconstruccio-
Una vez estabilizado el paciente desde el pun- nes tridimensionales de TAC permiten tener
to de vista hemodinámico y respiratorio, el pri- información volumétrica y espacial excelente
mer estudio radiológico que se debe realizar de las lesiones óseas vertebrales. La MRI a
en el paciente politraumatizado es la radiogra- su vez, puede demostrar contusión medular,
fía lateral de columna cervical. Esta determi- edema o sección medular. Una zona de hiper-
nará la presencia o no de lesiones traumáticas intensidad intramedular generalmente implica
de columna cervical en 90% de los casos y la presencia de sangre dentro de la médula
permitirá establecer si puede o no movilizarse (hematomielia). De igual manera puede de-
el paciente. Se deben visualizar las siete vér- mostrar la presencia de compresión de mé-
tebras cervicales y tener presente que al me- dula y raíces por disco, hematoma epidural,
nos 50% de los pacientes con trauma espinal fragmentos de vértebra, etc.
tienen una lesión asociada en otro sistema.
Funcionalmente se pueden evaluar la médula
Las radiografías AP y transoral pueden com- espinal y las raíces nerviosas mediante po-
plementar el estudio imagenológico inicial, tenciales evocados somatosensoriales y
aunque la placa transoral no es realizable en motores, los cuales valoran la conducción sen-
el paciente inconsciente y la AP demuestra sitiva y desde la periferia hasta la corteza ce-
10% o menos de las lesiones espinales rebral. Detectan entre otras, lesiones en los

351
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cordones posteriores (vía sensitiva) o latera- Desde el punto de vista fisiopatológico hay va-
les (vía piramidal) respectivamente. Los poten- rios eventos después de un trauma espinal
ciales evocados motores también son útiles que llevan finalmente a la desintegración de
para evaluar patología medular anterior. Es- la membrana celular, es decir a la “peroxida-
tos estudios se realizan como complemento ción lipídica de la membrana celular”. Algunos
diagnóstico y son de gran utilidad en el pacien- de estos eventos son la entrada de calcio al
te inconsciente y para monitoría transopera- espacio intracelular, el aumento de radicales
toria de cirugía en lesiones espinales traumá- libres, ácido araquidónico, prostaglandinas y
ticas (fracturas, luxaciones, descompre- tromboxano, la liberación de endorfinas y el
siones). aumento de norepinefrina. La peroxidación li-
pídica lleva a destrucción celular irreversible.

INTERVENCIÓN FARMACOLÓGICA A través de los años se han empleado gran


cantidad de compuestos para intentar dismi-
En el trauma medular se debe ante todo evitar nuir o anular el daño secundario derivado de
el daño secundario, el cual puede ser causado la peroxidación lipídica. La metilprednisolona
por hipotensión arterial, bradicardia, hipoxe- es la sustancia más aceptada en el momento
mia, hipercarbia, acidosis y aumento de la vis- para uso clínico en estos pacientes.
cosidad sanguínea.
La metilprednisolona tiene efectos inversos a
Después de una lesión neuronal hay tres posi- los de la fisiopatología del daño neuronal ano-
bilidades en cuanto a la viabilidad de una neu- tado. Esta molécula disminuye la entrada de
rona: calcio a la célula, aumenta el flujo sanguíneo,
e inhibe la prostaglandina F2alfa y el trombo-
1. La neurona queda anatómica y funcional- xano. Su administración constituye la base de
mente intacta. la intervención farmacológica en los pacien-
2. La neurona muere. tes con trauma espinal.
3. La neurona es viable pero queda anatómi-
ca y funcionalmente lesionada. El estudio NASCIS I (National Spinal Cord Injury
Sudy) realizado en 1979, valoró de modo experi-
En el primer grupo no se requiere mayor inter- mental la utilidad del uso de la metilprednisolona
vención terapéutica, salvo mantener condicio- sobre la recuperación neurológica en trauma es-
nes fisiológicas adecuadas. En el segundo pinal medular. No se documentó utilidad, y poste-
grupo no es posible hasta el presente lograr riormente el estudio NASCIS II en 1990 demos-
recuperación alguna, y son estas neuronas las tró que la administración esta droga en las prime-
responsables de las secuelas y limitación fun- ras ocho horas post trauma a dosis de 30 mg/kg
cional neurológica con que queda un pacien- de peso IV en infusión continua por 45 minutos,
te después de trauma espinal medular. Sin seguida de una infusión continua a dosis de
embargo en el segundo grupo, dependiendo 5,4mg/kg/h por 23 horas, sí se logró una mejor
del medio en que se encuentren estas neu- recuperación funcional motora y sensitiva tanto
ronas, pueden morir y pasar al tercer grupo experimental como en un estudio clínico pros-
aumentando la morbilidad y secuelas, o por pectivo doble ciego. De este estudio se adoptó la
el contrario mejorar, pasando así al primer gru- recomendación de emplear la metilprednisolona
po, disminuyendo las secuelas y aportando a estas dosis e iniciar su administración en las
actividad funcional mayor al paciente. primeras ocho horas post trauma.

352
CAPÍTULO XXXVI: TRAUMA RAQUIMEDULAR

En la actualidad, los resultados del último es- ser internados en el periodo agudo en unidad
tudio, el NASCIS III (1997) recomiendan que de cuidado intensivo. Es importante mantener
en caso de que la metilprednisolona se inicie volemia adecuada y presión arterial por enci-
entre la 3a y 8a hora post trauma, su administra- ma del límite normal, para asegurar adecua-
ción debe continuar hasta completar 48 ho- da presión de perfusión medular (PPM). La
ras. Si la administración se inicia en las tres disminución en la viscosidad sanguínea me-
primeras horas post trauma, es suficiente la jora esta perfusión. Esto se obtiene disminu-
metilprednisolona por 24 horas, tal como se yendo el hematocrito a 30-33%.
concluyó en el NASCIS II.
La función respiratoria generalmente se en-
Hay casos en los cuales no tiene utilidad la cuentra afectada. Tienen en mayor o menor
administración de esteroides, es decir no sirve grado compromiso de los músculos respirato-
la intervención farmacológica, pues el daño rios. Una sección en C4 preserva solamente
es severo, completo e irreversible, como por la función del diafragma. Por encima de este
ejemplo en la sección medular. Tampoco se nivel el paciente dependerá permanentemen-
ha demostrado utilidad en trauma penetrante. te del ventilador y puede requerir marcapaso
diafragmático de por vida. Por debajo de este
nivel, entre C4-C7, tiene integridad del diafrag-
TRATAMIENTO MÉDICO ma y músculos accesorios. Más caudalmente
puede tener preservación de intercostales y
Además de la intervención farmacológica ya abdominales según el nivel de la lesión me-
mencionada, hay otros factores muy impor- dular. Con frecuencia hay respiración paradó-
tantes que se deben vigilar en el paciente con jica, disminución en la capacidad de toser y
trauma espinal para evitar la aparición del distensión abdominal, lo cual lleva a la acu-
daño secundario neuronal. mulación de secreciones y eventualmente ate-
lectasias y neumonía. Consecuencia de lo an-
Los pacientes con trauma espinal y lesión me- terior son la hipoxemia, hipercarbia y acidosis,
dular presentan alteraciones funcionales car- factores que aumentan el daño secundario
diovasculares, respiratorias, urológicas y en medular.
la piel. Un área no menos importante es el
apoyo psicológico que requiere el paciente con Se requiere soporte respiratorio con ventila-
trauma espinal. ción mecánica en algunos casos, y en todo
paciente, terapia respiratoria intensiva para
En el aparato cardiovascular, el paciente con facilitar la movilización de secreciones y bue-
sección medular presenta un estado paradóji- na función respiratoria. La intubación debe ha-
co de hipotensión con bradicardia. Esto es de- cerse con sumo cuidado para evitar la movili-
bido a la lesión del sistema nervioso simpáti- zación de la columna cervical y producción de
co. Hay además vasodilatación periférica con daño neurológico. Puede ser necesaria la intu-
represamiento sanguíneo e hipovolemia rela- bación nasotraqueal o con el uso de un fibro-
tiva. La vasodilatación a su vez produce pér- broncoscopio.
dida de calor con la consiguiente hipotermia.
La estasis sanguínea junto con la parálisis de
Estos pacientes requieren monitoría continua extremidades favorece la aparición de trom-
de presión arterial, frecuencia cardiaca, diure- bosis venosas profundas (TVP) y el riesgo de
sis horaria y temperatura. Por lo tanto deben tromboembolismo pulmonar (TEP). El riesgo

353
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de TVP es alto, entre 80-100%, y el de TEP espinal son generalmente prevenibles: neu-
es de 45%. Esto es causa de importante mor- monía (30%), úlceras en piel (19%), y TVP-
bimortalidad. Los pacientes deben tener como TEP (5%).
profilaxis movilización pasiva de extremida-
des, uso de medias elásticas y recibir heparina
de bajo peso molecular (enoxaparina – dalte- INDICACIONES QUIRÚRGICAS
parina).
Los pacientes con trauma espinal pueden te-
El paciente con trauma espinal debe tener pro- ner indicación quirúrgica en dos situaciones:
tección gástrica (bloqueadores H2 – famoti-
dina, y protectores de mucosa – sucralfate) 1. Compresión de estructuras nerviosas (mé-
para evitar úlceras de estrés. Por la lesión del dula, raíces).
sistema nervioso autónomo, se presenta íleo; 2. Inestabilidad espinal que requiera fijación
este produce por un lado distensión abdomi- mediante instrumentación, artrodesis o
nal con elevación del diafragma que empeora ambas cosas.
aun más la función respiratoria, y por otro lado
reflujo, aspiración y neumonía. El íleo puede Como se mencionó, una de las indicaciones
producir un “tercer espacio” vascular que em- quirúrgicas del trauma espinal es la presencia
peora la hipovolemia relativa que presentan de hematoma o de fragmentos óseos dentro
estos pacientes. del canal espinal que compriman la médula;
estos se deben retirar siempre que exista com-
El paciente con lesión medular tiene vejiga promiso neurológico, especialmente si este es
neurogénica, la cual en fase aguda se maneja parcial.
con sonda vesical a permanencia (para con-
trol horario de diuresis y balance de líquidos) Algunas lesiones traumáticas espinales produ-
y posteriormente con reeducación de la fun- cen herniación del disco intervertebral con
ción vesical y cateterismo intermitente. compresión medular o radicular; estas pueden
requerir abordaje anterior de la columna para
La pérdida de la sensibilidad cutánea y la pa- descomprimir la médula espinal o las raíces.
rálisis favorecen la ulceración de piel, tejido En estos casos se extrae el disco interverte-
celular subcutáneo y músculos con el riesgo bral, se descomprimen las estructuras nervio-
de sobreinfección y sepsis. Estos pacientes sas y se coloca un injerto óseo generalmente
deben ser cambiados de posición cada dos tomado de cresta iliaca o un material de osteo-
horas o ser colocados en camas rotatorias o síntesis para lograr la artrodesis y fijación del
cama de Stryker para evitar las lesiones en segmento afectado.
piel.
La segunda indicación quirúrgica en el trauma
En forma precoz se debe iniciar un programa espinal es la inestabilidad segmentaria. Esta
de rehabilitación para reintegrar al paciente a frecuentemente produce dolor espinal y en el
una vida útil y productiva. Parte de este pro- grado más severo el desplazamiento anormal
ceso implica soporte psicológico. de las vértebras puede producir una lesión de
la médula o de raíces espinales que hasta ese
La neumonía y las úlceras por decúbito infec- momento se encontraban indemnes. Existe
tadas pueden progresar a sepsis y muerte. Las gran variedad de elementos disponibles co-
causas de muerte del paciente con trauma mercialmente para corregir la inestabilidad

354
CAPÍTULO XXXVI: TRAUMA RAQUIMEDULAR

espinal fijando la columna en los segmentos 6. Hauswald M, Braude D. Spinal immobilization in


comprometidos. trauma patients: is it really necessary? Curr Opin
Crit Care 2002; 8:566-570.
7. Kim DH, Jaikumar S, Kam AC. Minimally invasive
spine instrumentation. Neurosurgery 2002; 51:15-25.
LECTURAS RECOMENDADAS 8. Nockels RP. Nonoperative management of acute
spinal cord injury. Spine 2001; 26:31S-37S.
1. Ball PA. Critical care of spinal cord injury. Spine 9. Papaioannou A, Watts NB, Kendler DL, et al. Diag-
2001; 26:27S-30S. nosis and management of vertebral fractures in
2. Belanger E, Levi AD. The acute and chronic elderly adults. Am J Med 2002; 113:220-228.
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3. Fahy BG, Sivaraman V. Current concepts in Care Nurs Clin North Am 2000; 12:499-508.
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4. Fehlings MG, Sekhon LH. Acute interventions in 12. Sekhon LH, Fehlings MG. Epidemiology, demo-
spinal cord injury: what do we know, what should graphics, and pathophysiology of acute spinal cord
we do?. Clin Neurosurg 2001; 48:226-242. injury. Spine 2001; 26:2S-12S.
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Guidelines for the management of acute cervical deformity. Spine 2001; 26:111S-118S.
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2002; 49:407-498. Crit Care Nurs Clin North Am 2000; 12:509-519.

355
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXXVII

Traumatismo craneoencefálico

Germán Peña Quiñones, MD


Sección de Neurocirugía,
Fundación Santa Fe de Bogotá.
Profesor Titular de Neurocirugía, Universidad El Bosque.
Miembro de Número, Academia Nacional de Medicina de Colombia

L os traumatismos craneoencefálicos ocu-


rren más frecuentemente como parte de
politraumatismos y son responsables de casi
con un golpe) hasta las lesiones más severas
y complejas que pueden producir la muerte.

la tercera parte de la mortalidad por trauma. Varios mecanismos pueden producir trauma-
Representan 2% de todas las muertes en Es- tismos craneoencefálicos, pero se deben di-
tados Unidos; las causas más frecuentes de ferenciar dos tipos principales:
trauma craneoencefálico son los accidentes
automoviliarios, las heridas por arma de fuego 1. El impacto que recibe el cráneo y su conte-
y las caídas. Los primeros se presentan más nido al ser golpeado por un elemento con-
en los jóvenes, mientras las caídas afectan tundente mientras está en reposo, lo que pro-
principalmente a los mayores de 75 años. Se duce lesión en cuero cabelludo, hueso, dura
ha demostrado que la muerte del 50% de las y parénquima cerebral. Se origina una onda
personas que fallecen a causa de trauma ocu- de presión con severo aumento de la presión
rre inmediatamente después del accidente, intracraneal y cambios en la barrera hema-
30% en las dos primeras horas y 20% después toencefálica, la sustancia reticulada y los cen-
de varios días; igualmente se ha demostrado tros del bulbo raquídeo que pueden ocasio-
que con tratamiento intenso y precoz se puede nar paro respiratorio y cardiovascular. Tam-
disminuir la mortalidad por trauma craneoen- bién se generan cambios por aceleración y
cefálico hasta en 20%. desaceleración con lesiones del encéfalo, de
sus vasos y de los nervios craneanos.
2. El mecanismo en el cual el golpe no juega
FISIOPATOGENIA papel importante, sino que las lesiones son
el resultado de aceleración y desacelera-
El término “traumatismo craneoencefálico” im- ción durante las cuales se producen fuerzas
plica la serie de cambios que se presentan en lineales y especialmente rotacionales sobre
un paciente que recibe trauma en la cabeza; el encéfalo, dando lugar a un tipo específico
comprende diversos cuadros clínicos que van de lesión cerebral que ha sido denomina-
desde la mínima conmoción (“ver estrellas” do lesión axonal difusa.

356
CAPÍTULO XXXVII: TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO

Clasificación de los Traumatismos ración) o difusas (conmoción cerebral, lesión


Encefalo-craneales axonal difusa y hemorragia subaracnoidea).
Las lesiones secundarias son: daño isqué-
Lesiones del Cuero Cabelludo mico, hematomas (intracerebrales, epidurales
Traumatismo abierto y subdurales que pueden ser agudos o cróni-
Traumatismo cerrados cos) y edema cerebral.
Lesiones del Cráneo
Fracturas Lineales También se pueden producir por el traumatis-
Deprimidas mo mismo lesiones vasculares, edema cere-
De la Base bral y lesiones de los nervios craneanos, así
Lesiones del Encéfalo como alteraciones de la absorción del líquido
Lesiones Primarias cefalorraquídeo.
Focales: contusión, laceración
Difusas: conmoción, lesión axonal
difusa, hemorragia subaracnoidea CUADRO CLÍNICO
Lesiones Secundarias
Lesión isquémica El cuadro clínico varía de acuerdo con el tipo
Hematomas: de lesión y su evolución; el paciente puede
extradurales, estar alerta pero presentar una lesión grave;
subdurales: puede también llegar en coma o con severas
A) Agudos alteraciones del estado de conciencia.
B) Crónicos
Intracerebrales
Edema Cerebral LESIONES ENCEFÁLICAS PRIMARIAS
Heridas penetrantes
Lesiones vasculares Difusas
Lesiones de nervios craneanos La lesión primaria difusa del encéfalo que ocu-
Secuelas rre cada vez que el golpe es suficientemente
severo para transmitir la onda de presión sobre
Con el traumatismo se puede lesionar el cuero la sustancia reticulada del tallo cerebral es la
cabelludo y según esto se dividen los trauma- conmoción cerebral, que ha sido definida co-
tismos en abiertos y cerrados. También ocu- mo el síndrome clínico caracterizado por alte-
rren fracturas del cráneo que pueden ser linea- ración inmediata y transitoria de la función neu-
les, deprimidas (conminutas) y de la base, en ral, ya sea de la conciencia, de la visión o del
las que se puede comunicar el contenido intra- equilibrio, producida por causas mecánicas. El
craneano con cavidades potencialmente sép- cuadro puede ser muy variable y el ejemplo
ticas como las fosas nasales, los senos para- más frecuente de conmoción cerebral leve es
nasales y el oído y si la fractura es abierta, cuando el paciente “ve estrellas” al sufrir un
con el exterior, todo lo cual causa complica- golpe en la cabeza; una conmoción cerebral
ciones como fístulas de líquido cefalorraquí- severa puede implicar pérdida de la concien-
deo, meningitis y abscesos cerebrales. cia con crisis transitoria de rigidez, al recibir el
golpe, con recuperación y sin secuelas.
Las lesiones del encéfalo propiamente dicho
se dividen en primarias y secundarias. Las pri- En el cuadro de lesión axonal difusa, el daño
marias pueden ser focales (contusión y lace- se produce por aceleración y desaceleración

357
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

rotacional con ruptura de axones y formación EVALUACIÓN Y ATENCIÓN


de pequeñas hemorragias en el tallo cerebral PREHOSPITALARIA
que se traducen en alteraciones prolongadas
de la conciencia y que en los casos modera- El tratamiento debe iniciarse en el sitio del
dos y severos se acompaña de muchas se- accidente. Hay normas básicas de reanima-
cuelas neurológicas. ción sobre las cuales se debe instruir a los
socorristas, a los miembros de la policía y al
La hemorragia subaracnoidea se presenta personal paramédico que trabaja en las am-
con gran frecuencia en los traumatismos se- bulancias.
veros y produce isquemia cerebral.
Primero se debe asegurar vía aérea, luego se
Focales debe garantizar buena ventilación e iniciar tra-
La contusión cerebral se presenta al golpear tamiento de alteraciones hemodinámicas con
el encéfalo contra el cráneo. El término impli- reemplazo de líquidos debido a que la mayoría
ca lesión del parénquima cerebral de origen de los pacientes han sufrido politraumatismo.
traumático sin lesión de la piamadre, porque Siempre se debe tener en cuenta que los pa-
si ésta se lesiona, como ocurre con las heri- cientes con trauma de cráneo, frecuentemente
das perforantes, se produce una laceración presentan lesiones de columna cervical y si
cerebral. Los síntomas son muy diversos y el paciente se encuentra con alteraciones de
dependen tanto de la región afectada como la conciencia, se supone que tiene lesión de
del tamaño de la contusión, del edema que la columna cervical y se debe inmovilizar en
produce y de la compresión sobre estructu- forma inmediata, antes de mover al paciente.
ras vecinas. En ocasiones, por su tamaño y
por su localización pueden producir hiperten-
sión endocraneana. CRITERIOS DE REFERENCIA
La supervivencia de muchos pacientes depen-
LESIONES ENCEFÁLICAS SECUNDARIAS de de la rapidez con que sean evacuados del
sitio del accidente hacia un centro médico que
Lesión isquémica cerebral: si no se corrige esté en capacidad de atenderlos. La parte
rápidamente, va a ser responsable del empeo- motora de la Escala de Glasgow se relaciona
ramiento de las lesiones encefálicas primarias muy bien con el pronóstico: aquellos con pun-
y el consecuente mal pronóstico; ocurre mas taje mayor de 6 (obedecen órdenes) tienen
frecuentemente cuando hay hemorragia suba- buen pronóstico, mientras que los que tengan
racnoidea traumática. Se encuentra en 91% 5 ó menos deben ser evacuados rápidamen-
de los casos fatales. Las otras lesiones secu- te porque tienen mayores probabilidades de
ndarias son el edema cerebral y los hemato- presentar lesiones intra-craneanas.
mas epidurales, intracerebrales y subdurales
que pueden ser agudos o crónicos. En todos
los traumatismos se puede presentar cuadro
de hipertensión intracraneal, que requiere
diagnóstico preciso y oportuno.

358
CAPÍTULO XXXVII: TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO

TRATAMIENTO 6. En trauma leve sin pérdida de la con-


ciencia pero con evidencia de ingesta
En el servicio de Urgencias de alcohol.
7. En trauma leve sin pérdida de la con-
Evaluación general: Vía aérea, Ventila- ciencia pero con deterioro del estado
ción, Evaluación hemodinámica (ABC del neurológico.
ATLS)
Evaluación neurológica: B. Consulta de neurocirugía
Escala de Glasgow 1. En todos los pacientes con trauma leve
Radiografías de columna cervical que requieran TAC, y si ésta es anormal.
No tomar radiografías simples de cráneo 2. En todos los pacientes con trauma leve,
TAC cerebral con Glasgow 13 y 14.
3. A todos los pacientes con trauma leve
y trauma cervical.
Pacientes con traumatismo 4. A todos los pacientes con trauma leve
craneoencefálico “Leve” y Glasgow 15 que el médico de urgen-
Son aquellos que según la Escala de Trauma cias crea necesario.
de Glasgow estén calificados entre 13 y 15. 5. En todos los niños con trauma leve y
Glasgow 15, cuyos padres lo soliciten.
Se recomienda: 6. En todos los pacientes con trauma leve
A. Escanografía cerebral (TAC) y Glasgow 15 con sospecha de fractura
1. En trauma leve con pérdida de concien- de base de cráneo, lesión en el TAC o
cia (Glasgow 13-15); entre estos pacien- sospecha de lesión neurológica, fístula
tes 18% presentan anormalidades en el de líquido cefalorraquídeo o de fractura
TAC y 5% presentan lesiones que re- deprimida o abierta del cráneo.
quieren cirugía.
2. Aunque no haya pérdida de la concien-
cia, si hay traumatismo craneofacial se- TRATAMIENTO
vero, con o sin lesión de vía aérea y en
traumatismo severo de cráneo. El tratamiento de estos pacientes, si se ha
3. En trauma leve, sin pérdida de la con- demostrado que tienen TAC normal, es ob-
ciencia, si tienen evidencia o sospecha servación por 24 horas, que se efectuará en
de fractura de base de cráneo (otorragia, el hospital o en la casa según el paciente, el
signo de Batle, signo del Mapache, etc.). sitio del trauma y si hay o no lesiones asocia-
4. En trauma leve sin pérdida de la con- das (heridas faciales, etc.). Si la TAC es anor-
ciencia, con sospecha o evidencia de mal, el tratamiento debe ser el específico de
fractura deprimida del cráneo, especial- la lesión encontrada.
mente si es abierta.
5. En trauma leve sin pérdida de la con- Los pacientes con traumatismos “leves”, que
ciencia y politraumatismo severo, espe- no presenten alteraciones en la escanografía,
cialmente en pacientes que por su con- pueden ser observados en su casa, si no su-
dición requieran cirugía inmediata, se- fren lesiones asociadas y tienen como ser con-
dación o tratamiento en unidad de cui- trolados; la familia debe ser clara y completa-
dado intensivo. mente informada y entender que la escano-
grafía normal no les asegura que más tarde

359
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

no se pueda presentar una lesión que requie- A los pacientes y a sus familiares se les instrui-
ra tratamiento. rá sobre los controles neurológicos que inclu-
yen estado de conciencia y orientación, esta-
Los pacientes con lesiones asociadas, deben do de pupilas y reflejos pupilares y estado de
ser controlados en el hospital. Igualmente fuerza muscular y de reacción ante diferentes
deben ser hospitalizados aquellos pacientes, situaciones. Se le explicará a la familia la ne-
que por su condición socioeconómica o fami- cesidad de regresar de nuevo al servicio
liar no tengan la garantía de ser observados de Urgencias si se presentan alteraciones.
apropiadamente en su hogar.

Figura 2. Manejo del trauma craneoencefálico

No lesión asociada Lesión asociada

ENFOQUE INICIAL DE LOS PACIENTES CON TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO


MODERADO Y SEVERO

EVALUACIÓN GENERAL VÍA AÉREA, VENTILACIÓN


Los pacientes con politraumatismos severos Se debe intubar a los pacientes clasificados
presentan: 86% fracturas de las extremidades, con 8 ó menos en la Escala de Glasgow, sin
69% traumatismos craneoencefálicos, 62% flexionar columna cervical, debido a que se
traumatismos torácicos, 36% lesiones intra- deben tratar como si tuvieran lesión cervical,
abdominales, 28% lesiones pélvicas y 14% hasta que se compruebe que no la tienen; es
lesiones espinales. Estas lesiones deben ser necesario vigilar que estos pacientes tengan
diagnosticadas y tratadas al mismo tiempo que ventilación apropiada.
la lesión neurológica.

360
CAPÍTULO XXXVII: TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO

ESTABILIZACIÓN HEMODINÁMICA las que puedan poner en peligro la vida del


paciente tales como hemotórax, neumotórax,
Los pacientes con traumatismos graves y mo- lesiones cardiacas y de vísceras abdominales
derados, generalmente víctimas de politrau- con hemorragia. Las fracturas deben ser inmo-
matismos con gran frecuencia presentan hipo- vilizadas rápidamente.
tensión y anemia. Requieren reemplazo de lí-
quidos y estabilización hemodinámica que se No se debe pasar sonda nasogástrica a pa-
debe iniciar desde el sitio del accidente, duran- cientes con trauma severo de cráneo que es-
te su traslado al servicio de urgencias del hos- tán en coma o con hemorragia nasofaríngea,
pital y durante su permanencia en éste. Se por el riesgo de penetrar al cráneo a través
deben evitar todos los movimientos innece- de fracturas en la base.
sarios del paciente ya que durante estos se
pueden presentar periodos de hipotensión.
Para la estabilización hemodinámica se han EVALUACIÓN NEUROLÓGICA
utilizado diferentes soluciones tanto cristaloi-
des como coloides, entre ellas poligelatinas, 1. Historia del trauma.
dextrano e hidroxietil almidón. Se recomien- 2. Estado general del paciente.
da una dosis de 250 ml de solución de dextrán 3. Evidencia de estar bajo efecto de alcohol
en solución salina al 7,5%, antes de los crista- o drogas.
loides para el tratamiento del shock, con lo 4. Estado de conciencia, orientación. Palabra
que se logra que los pacientes requieran me- y hemisferio dominante.
nor cantidad de líquidos y lleguen al servicio 5. Clasificación dentro de la Escala de Coma
de urgencias con mejor presión arterial. El de Glasgow.
dextrán puede producir alteraciones en la coa- 6. Amnesia del accidente y del tiempo trans-
gulación sanguínea por inhibición de la agre- currido después de éste, duración del pe-
gación plaquetaria si se da a dosis mayores. ríodo de amnesia.
El hidroxietil almidón (Hetastarch®) tiene ac- 7. Examen del Cráneo
ciones similares, más prolongadas pero tam- • Estado de la piel. Heridas. Palpación de
bién puede alterar la coagulación. Las polige- éstas.
latinas en combinación con Lactado de Ringer • Existencia de hematomas subgaleales
se recomiendan como los coloides de elección y de dolor.
para tratamiento del shock hemorrágico, por • Deformaciones faciales y fracturas de
presentar viscosidad similar al plasma sin pro- cara.
ducir alteraciones de la coagulación. De acuer- • Salida de líquido cefalorraquídeo, teji-
do con las recomendaciones del Brain Trauma do cerebral o sangre por oído o por fo-
Foundation, la evidencia es que la solución sas nasales.
salina isotónica, administrada en cantidad sufi- 8. Examen de pares craneales, en especial
ciente puede mantener la presión arterial den- pupilas y reflejos pupilares.
tro de límites normales. 9. Examen de sistema motor.
10.Examen de sensibilidad.
TRATAMIENTO DE LESIONES ASOCIADAS 11.Reflejos miotáticos y cutáneos.
12.Coordinación y marcha si el paciente pue-
Es igualmente importante el tratamiento rápi- de colaborar.
do de las lesiones asociadas, especialmente 13.Examen de columna.

361
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ESCANOGRAFÍA Los pacientes con lesiones de manejo quirúr-


gico deben ser llevados a cirugía en forma
En todos los pacientes con traumatismos mo- inmediata. De acuerdo con los hallazgos de
derados y graves se practica TAC cerebral que la escanografía, se clasifican los traumatismos
incluya las tres primeras vértebras cervicales. así:

Categoría Definición
Lesión difusa l Escanografía normal
Lesión difusa II Cisternas presentes, con desviación de línea media entre 0 y 5 mm.
Lesiones de diferente densidad, menores de 25 cc.
Lesión difusa III (Edema) Cisternas comprimidas o ausentes, con desviación de línea media entre
0 y 5 mm, sin lesión de densidad alta o mixta mayor de 25 cc.
Lesión difusa IV (Desviación) Desviación de línea media mayor de 5 mm, sin lesión de densidad
alta o mixta mayor de 25 cc.
Masa evacuada Cualquier tipo de masa evacuada
Masa no evacuada Cualquier tipo de masa mayor de 25 cc no evacuada

TRATAMIENTO POSTERIOR aquellos en quienes por escanografía se des-


carte aumento de la presión intracraneal. Entre
Los pacientes con traumatismo moderado los pacientes a quienes por esta razón se deci-
(Glasgow entre 9 y 13) deben ser hospitaliza- da no hacer monitoría de presión intracraneal,
dos para diagnóstico neurológico y tratamiento se deben reconsiderar los pacientes mayores
específico de su lesión. Los pacientes con gra- de 40 años, los que durante la reanimación
duación en la Escala de Glasgow de 8 ó me- hubieran tenido hipotensión y los que presen-
nos, después de intubados en el servicio de ten postura motora anormal, debido a que es-
urgencias, si no tienen lesión quirúrgica se tra- tos grupos de pacientes, tienen altas probabi-
tan en la unidad de cuidado intensivo y re- lidades de desarrollar hipertensión endocra-
quieren lo siguiente: neana y en ellos es necesario repetir la TAC
6-8 horas después. El tratamiento de la pre-
Tratamiento respiratorio: el paciente en co- sión intracraneal se debe iniciar cuando llega
ma no está anestesiado y por lo tanto requie- a 20 mmHg.
re analgesia y sedación para prevenir aumento
de la presión intracraneal. Requiere además Para tratar el aumento de la presión intracra-
relajación muscular y ventilación mecánica, neal se utilizan relajantes musculares, seda-
para mantener buena oxigenación con PaCO2 ción, manitol, barbitúricos, hiperventilación,
de 30-35 mm Hg y PaO2 > 80 mmHg, condi- retiro de líquido cefalorraquídeo por medio de
ciones más favorables para evitar aumento de punción ventricular, furosemida, solución sa-
la presión intracraneal. lina hipertónica, hipotermia y otras medidas,
pero para esto es indispensable tener un diag-
Monitorización y tratamiento de presión nóstico exacto por escanografía y sólo se debe
intracraneal: hay indicación de monitoría de practicar en unidades de cuidado intensivo por
la presión intracraneal en todos los pacientes personal médico especializado.
con Glasgow de 8 ó menor con excepción de

362
CAPÍTULO XXXVII: TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO

No se recomienda el uso de esteroides en este de pacientes con hematomas subdurales


momento porque solamente no mejoran la hi- agudos.
pertensión endocraneal sino aumentan la mor-
bilidad de los pacientes con traumatismos cra- Furosemida: desde 1987 se demostró que la
neoencefálicos severos. Se debe practicar disminución de la presión intracraneana ejer-
monitorización hemodinámica por medio de- cida por el manitol era más efectiva y sosteni-
terminación de presión arterial media y por da, cuando la dosis del anterior, era precedida
catéter de Swan Ganz cuando está indicado, por furosemida. Igualmente se demostró que
de acuerdo con el estado hemodinámico. Tam- disminuye el riesgo de edema pulmonar y pro-
bién es necesario hacer monitorización hemo- mueve la excreción del manitol por el riñón.
dinámica cerebral, con cálculo y control del
flujo sanguíneo cerebral (FSC), de la oxigena- Solución salina hipertónica: se ha recomenda-
ción cerebral y de la presión de perfusión ce- do utilizar bolos de solución salina al 23,4%
rebral (PPC). Está indicado calcular la extrac- en pacientes para disminuir la presión intracra-
ción cerebral de oxígeno, que se entiende co- neal y aumentar la presión de perfusión cere-
mo la diferencia entre la saturación arterial de bral, sin disminuir el volumen circulatorio intra-
oxígeno (SaO2) y la saturación venosa yugu- vascular, basados en el hecho que la solución
lar (SyO2). salina hipertónica aumenta la adaptación del
tejido cerebral al aumento de presión intracra-
Manitol: agente hipertónico, inerte y sin toxici- neal, mejora el flujo sanguíneo cerebral y au-
dad, cuya acción se ejerce en el espacio extra- menta el volumen intravascular y el rendimien-
celular induciendo un gradiente osmótico entre to cardiaco.
el plasma y el encéfalo en los sitios donde la
barrera hematoencefálica se encuentre intac- Barbitúricos: el tratamiento de los pacientes
ta; disminuye la producción de líquido cefalo- con lesiones cerebrales severas de origen
rraquídeo y produce cambios en la deformidad traumático, debe estar dirigido a reducir la pre-
de los eritrocitos, con vasoconstricción, dismi- sión intracraneal y el consumo metabólico
nución de la viscosidad sanguínea y del volu- cerebral y aumentar el pH celular, todo lo cual
men sanguíneo cerebral y por lo tanto de la se logra con barbitúricos, tienen el problema
presión intracraneal. Aumenta el metabolismo de producir hipotensión arterial. Su uso está
cerebral de oxígeno y tiene efecto osmótico restringido a pacientes en unidades de cuida-
equivalente al de la urea, sin el efecto de rebo- do intensivo, con control hemodinámico y de
te. Reduce la presión intracraneal pocos minu- la presión intracraneal permanentes; es reco-
tos después de haber sido administrado y su mendable hacer dosificación de los niveles
efecto es más marcado en pacientes con baja séricos del medicamento.
presión de perfusión cerebral. Se utiliza en do-
sis de 250 mg/kg de peso, cada 4 horas, previo Monitorización del flujo sanguíneo cere-
diagnóstico de la lesión del paciente y una vez bral: la medición del flujo sanguíneo cerebral
descartados los hematomas que requieran ci- (FSC) se ha practicado con diferentes méto-
rugía. Se recomienda hacer controles de la dos desde la forma clásica mediante el óxido
osmolaridad plasmática y mantenerla menor nitroso descrita por Kety Schmidt, con Xenon
de 320 mOsm para que no haya lesión renal. 133, por medio de doppler transcraneal, por
Recientemente se ha sugerido el uso de ma- SPECT (Single Positron Emission Tomogra-
nitol en altas dosis, antes de cirugía, con lo phy) y otras que incluyen el uso de la resonan-
cual se ha reportado mejoría del pronóstico cia magnética nuclear y de la escanografía

363
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

intensificada con Xenon 133 respirado. El 6. Kleppel JB, Lincoln AE, Winston FK. Assessing
Doppler transcraneal es el método que mejor head-injury survivors of motor vehicle crashes at
puede detectar los casos de espasmo arterial discharge from trauma care. Am J Phys Med
Rehabil 2002; 81:114-122.
cerebral responsables de lesiones isquémicas
7. Latronico N, Beindorf AE, Rasulo FA, et al. Limits
que se presentan en la mayoría de los pacien- of intermittent jugular bulb oxygen saturation
tes que fallecen por trauma cerebral. También monitoring in the management of severe head trau-
se puede utilizar para hacer medidas de los ma patients. Neurosurgery 2000; 46:1131-1139.
cambios en la velocidad de la circulación de 8. Mascia L, Andrews PJ, McKeating EG, et al. Ce-
las arterias basales cerebrales, para detectar rebral blood flow and metabolism in severe brain
aumento de la presión intracraneal y disminu- injury: the role of pressure autoregulation during
ción de la presión de perfusión cerebral. cerebral perfusion pressure management.
Intensive Care Med 2000; 26:202-205.
9. Munch E, Horn P, Schurer L, et al. Management
Manejo metabólico: en los pacientes con of severe traumatic brain injury by decompressive
trauma de cráneo severo existe un estado de craniectomy. Neurosurgery 2000; 47:315-23.
hipermetabolismo, hipercatabolismo e hiper- 10. Palmer S, Bader MK, Qureshi A, et al. The impact
glicemia; esto implica aumento en el requeri- on outcomes in a community hospital setting of
miento calórico del paciente, que en ocasiones using the AANS traumatic brain injury guidelines.
es igual al que puede presentar un paciente Americans Associations for Neurologic Surgeons.
con quemaduras del 40% de su superficie J Trauma 2001; 50:657-664.
11. Robertson CS, Valadka AB, Hannay HJ, et al.
corporal, con un requerimiento calórico hasta
Prevention of secondary ischemic insults after
del 325% de lo normal. Este hipermetabolismo severe head injury. Crit Care Med 1999; 27:2086-
es inversamente proporcional al Glasgow; a 2095.
menor puntaje en la escala de coma de Glas- 12. Sahuquillo J, Poca MA, Arribas M, et al. Interhemis-
gow, mayor será el requerimiento metabólico pheric supratentorial intracranial pressure gra-
del paciente. dients in head-injured patients: are they clinically
important? J Neurosurg 1999; 90:16-26.
13. Velmahos GC, Shoemaker WC, Wo CC.
Physiologic monitoring of circulatory dysfunction
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1. Clifton GL, Choi SC, Miller ER, et al. Intercenter 14. Wellwood J, Alcantara A, Michael DB. Neuro-
variance in clinical trials of head trauma - trauma: the role of CT angiogram. Neurol Res
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Study: Hypothermia. J Neurosurg 2001; 95:751- 15. Whitfield PC, Patel H, Hutchinson PJ, et al.
755. Bifrontal decompressive craniectomy in the mana-
2. Cooper P, Golfinos J. Head Injury. 4th edition. gement of posttraumatic intracranial hypertension.
Appleton & Lange, Norwalk. 2000. Br J Neurosurg 2001; 15:500-507.
3. Corso C, Vargas M. Traumatismo craneoen-
cefálico: enfoque para la decision de urgencias.
Med UIS 1997;11:202-209. INTERNET.
4. Dacey R. Trauma of the Central Nervous System. Early management of patients with a head injury. A
Lippincott Williams & Wilkins. Philadelphia, 1985. national clinical guideline. Disponible en
5. Diringer MN, Yundt K, Videen TO, et al. No www.guidelines.gov
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early moderate hyperventilation following severe Practice management guidelines for the management
traumatic brain injury. J Neurosurg 2000; 92:7-13. of mild traumatic brain injury. www.east.org

364
CAPÍTULO I: DOLOR TORÁCICO

CAPÍTULO I

Dolor torácico

Mónica Jaramillo, MD
Instituto de Enfermedades Cardiovasculares
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l dolor torácico es la segunda causa de


consulta en la mayoría de los servicios
de urgencias. No existe una estadística confia-
Existen tres problemas principales en el ma-
nejo de los pacientes con dolor torácico:

ble sobre su incidencia en Colombia. 1. Demora entre el inicio de los síntomas y la


llegada al hospital,
La causa de dolor torácico varía: puede ser de 2. Retardo en el diagnóstico de IAM y comien-
tipo osteomuscular (43%), o de origen cardía- zo del tratamiento adecuado.
co (45% a 69%). La proporción de pacientes 3. Diagnóstico incorrecto, principalmente en
que se hospitalizan por dolor torácico llega en pacientes con síntomas atípicos.
Europa hasta un 20%. Datos de Estados Uni-
dos muestran que en 17% de los pacientes el Las causas más frecuentes de dolor torácico
dolor torácico es por isquemia cardíaca y en se pueden apreciar en la tabla No.1.
8% por infarto agudo del miocardio (IAM).

TABLA No.1. CAUSAS DE DOLOR TORÁCICO

Cardíaco No Cardiaco
Síndrome-coronario agudo Embolismo pulmonar
Pericarditis Costocondritis
Disección aórtica Gastrointestinal
Estenosis aórtica Enfermedad esofágica
Prolapso de válvula mitral Espasmo
Cardiomiopatía hipertrófica Reflujo
Angina microvascular Inflamación
Gastritis
Úlcera gástrica o duodenal
Colecistitis
Psiquíátrico
Desórdenes de pánico
Depresión
Criptogénico (desconocido)

367
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Más del 60% de los casos son de origen extra- Cómo debe proceder usted:
cardíaco, y de ellos 75% son de origen gastro- • Tome una aspirina de 500 mg masticada.
intestinal. • Llame inmediatamente a un médico o a un
servicio de urgencias.
Como el pronóstico y los resultados en el IAM • No espere a que los síntomas desaparez-
dependen de la oportunidad con que se ad- can; a pesar de sentirse mejor, su vida pue-
ministre el tratamiento, actualmente se intenta de seguir en peligro.
educar a la población para que consulte tem-
prano en caso de dolor torácico con un pro- La segunda puerta. El médico general: En
grama llamado “las cinco puertas”, a saber: un dolor torácico agudo y prolongado, rara vez
es difícil el diagnóstico. Si no es causado por
Primera puerta. El paciente. Los pacientes un trauma, el diagnóstico diferencial debe in-
suelen acudir tarde al departamento de urgen- cluir IAM, disección aórtica, tromboembolismo
cias ya sea por la edad, la creencia que todo pulmonar, neumotórax u otras afecciones vas-
ataque cardíaco es mortal, el vivir en área ru- culares o pulmonares que requieren atención
ral y/o pertenecer a un estrato socioeconómico inmediata. Los pacientes deben ser referidos
bajo. Se propone la educación, para llevar a a un servicio de urgencias donde al menos
consulta inmediata a pacientes de alto riesgo, pueda tomarse un ECG de 12 derivaciones y
con mensajes como los siguientes: hacer pruebas de laboratorio.

• El diagnóstico y tratamiento tempranos Pacientes con dolor torácico en reposo mayor


pueden salvarle la vida. de 20 minutos sugestivo de síndrome corona-
• Molestias y síntomas en el pecho indican rio agudo, o aquellos con inestabilidad hemo-
una enfermedad seria que puede amena- dinámica, síncope reciente o presíncope, de-
zar su vida. ben ser remitidos inmediatamente al servicio
• Los síntomas varían y pueden aparecer de urgencias o a una unidad especializada en
como dolor torácico, opresión, disnea, peso manejo de dolor torácico.
en el pecho o apenas una molestia leve.
• El dolor se puede irradiar a la mandíbula, Si el paciente está a más de dos horas de
los brazos, la nuca o la espalda. dicho servicio, varios estudios han demostra-
• El inicio puede ser gradual, agudo o intermi- do el valor del tratamiento trombolítico prehos-
tente. pitalario, con reducción de la mortalidad has-
• Cuando por la molestia torácica hay que ta en un 17%, si se confirma con certeza el
suspender la actividad normal o si aquella diagnóstico de IAM.
se acompaña de sudor frío, náusea, vómi-
to, mareo o desmayo, miedo o ansiedad, Recomendaciones:
todo ello indica enfermedad severa mien- • El grado o intensidad de los síntomas es
tras no se demuestre lo contrario. pobre indicador del riesgo, aunque el tipo
• Por otra parte, dolor que varía con la inspi- de molestia torácica, su patrón de irradia-
ración, los cambios de posición o la ingesta ción y los síntomas concomitantes, como
de comida, está bien localizado en la pa- diaforesis, náusea, sudor frío, o palidez,
red torácica y se exacerba con la palpación, señalan un cuadro potencialmente grave.
suele indicar una afección menos severa. • Un paciente con inestabilidad hemodiná-
mica (hipotensión, shock) o que presente
arritmia (bradicardia o taquicardia) necesi-

368
CAPÍTULO I: DOLOR TORÁCICO

ta atención inmediata sin importar cuál sea por el personal de la ambulancia son: estable-
la causa. cer si hay signos vitales adecuados, estabilizar
• Si se sospecha IAM debe seguirse la guía al paciente, iniciar un diagnóstico y prevenir
preparada para el efecto. el desarrollo de complicaciones y daño perma-
nente. Lo primero que se debe decidir es si el
La tercera puerta. El centro de atención de paciente necesita tratamiento de emergencia.
ambulancias: las fases de atención en el cen- El próximo paso es obtener un ECG, ya que
tro de ambulancias siguen el siguiente orden: su obtención prehospitalaria ha demostrado
reducir la mortalidad en estos pacientes. El
1. Identificación del problema a nivel sintomá- trazado debe ser transmitido al hospital para
tico, no diagnóstico. valoración por el médico. Debe obtenerse una
2. Determinar la prioridad y el nivel de muestra de sangre para medición rápida de
atención. troponina, antes de llegar al hospital. Cuando
3. Despachar la ambulancia con indicaciones hay médico en la ambulancia se deben iniciar
adecuadas. Los despachadores deben los tratamientos arriba mencionados.
tener entrenamiento formal y estar certifi-
cados. Recomendaciones
• La mayoría de los pacientes en ambulan-
Recomendaciones: cia necesitan atención urgente. La primera
• Valorar los síntomas y signos para esta- prioridad es la valoración de signos vitales
blecer la prioridad de atención, no para ha- y estabilización del enfermo.
cer un diagnóstico. • Las acciones tomadas pueden depender
• Enviar una ambulancia inmediatamente de quien valoró el paciente, si un médico o
donde cualquiera de las siguientes condi- un paramédico.
ciones estén presentes: • Si es posible, tomar e interpretar un ECG
- Molestia severa (dolor, opresión severa, en 5 minutos.
dificultad para respirar) por más de 15
minutos al momento de la llamada. Quinta puerta. El hospital: el personal admi-
- Localización en cualquier parte del pe- nistrativo de urgencias (porteros, administra-
cho incluyendo cuello, brazos, espalda dores y personal de seguridad) debe estar en-
y abdomen alto. trenado para reconocer aquellos pacientes
- Asociación con diaforesis, náusea y que requieran evaluación inmediata por el tria-
vómito. ge de enfermería y deban ser ingresados di-
- Si es un paciente mayor de 30 años, con rectamente a la sala de emergencias. Ya se
angina ya conocida o ataque cardíaco han mencionado los síntomas y signos princi-
previo; si el dolor se extiende al brazo pales. Las enfermeras del triage deben estar
derecho o si hay pérdida intermitente de entrenadas para reconocer los pacientes con
conciencia, se debe sospechar un IAM probable síndrome coronario agudo y otras
que requiere atención más rápida. condiciones que amenacen la vida.
- La ambulancia debe estar provista para
el manejo de un posible paro cardiorres- Deben tenerse en cuenta los siguientes ante-
piratorio. cedentes:
• Angina previa, infarto del miocardio, angio-
La cuarta puerta. La ambulancia: los objeti- plastia coronaria o stent previo, revascula-
vos principales en la valoración y tratamiento rización miocárdica previa.

369
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Dolor que mejoró con nitroglicerina. La enfermera de urgencias debe ingresar al


• Factores de riesgo coronario: hipertensión, paciente mientras termina de hacer un interro-
diabetes mellitus, obesidad, tabaquismo, gatorio rápido y se toma un ECG; antes de 10
hipercolesterolemia, historia familiar, uso de minutos el paciente debe ser valorado por el
cocaína. médico. Muchas unidades de dolor torácico
• Medidas especiales deberán tomarse en tienen un algoritmo especialmente diseñado
pacientes con falla cardíaca o accidente para hacer esta tarea más eficiente, como el
cerebrovascular previos, recordando que empleado en la Fundación Santafé de Bogo-
ancianos, mujeres y diabéticos pueden pre- tá (Gráfico No.1).
sentar dolor torácico atípico.

Gráfico No.1
EVALUACIÓN INICIAL EN URGENCIAS DEL DOLOR TORÁCICO

- Triage: Queja principal de molestia/dolor torácico o equivalente de angina Fecha____/____/____


- Colocar monitor cardíaco y obtener imagen Hora _________
- SV: PA Brazo Der ____/_____ Izq____/____ FC_____ FR____ T_____ Hora _________
- Pulso-oximetría al aire, luego O2 por cánula a SaO2 >91% Hora _________
- ECG de doce derivaciones en 5 minutos (Si es inferior también derecho) Hora _________
- Aspirina 500 mg masticados si no hay alergia o sangrado activo Hora _________

- Obtener la siguiente información con respuestas cortas mientras se toma el ECG


Sexo Hombre Mujer
Edad Años
Peso Kg
Molestia o dolor torácico ahora Sí No
Tiempo total de dolor Horas
Disnea Sí No
Diaforesis Sí No
Irradiación
-Donde? Espalda Mandíbula Brazo Izq. Brazo Der. Otro(cual)
Náusea y vómito Sí No
Mejoría con nitroglicerina Sí No
Infarto previo Sí No
Angioplastia o stent previo Sí No
Cirugía cardiaca previa Sí No
Hipertensión Sí No
Diabetes mellitus Sí No
Hipercolesterolemia Sí No
Historia familiar enf. coronaria Sí No
Tabaquismo Actual Suspendido
Uso de cocaína última semana Sí No
Uso de Viagra en últimas 24 horas Sí No

ECG de 12 derivaciones y esta hoja presentada al MD de turno Hora _________

META : 10 MINUTOS PARA HACER LAS TAREAS ANTERIORES

370
CAPÍTULO I: DOLOR TORÁCICO

PACIENTE DE ALTO RIESGO


Si el paciente es de alto riesgo, seguir el si-
guiente algoritmo (Gráfico No. 2):

Gráfico No. 2
ALGORITMO No. 1: VALORACIÓN INICIAL EN EL DEPARTAMENTO DE URGENCIAS, PACIENTES DE ALTO RIESGO

Dolor Torácico
Evidencia de compromiso hemodinámico, síntomas disautonomía, cianosis o sugestivo.

Valoración inmediata (<10 min) Tratamiento General


Signos vitales con presión arterial Oxígeno por cánula
Saturación de oxígeno Acceso intravenoso
ECG de doce derivaciones Cristaloides IV si hay hipotensión
Historia Clínica Dirigida Nitroglicerina IV si hay hipertensión
Niveles de marcadores séricos iniciales Morfina IV (Si el dolor no mejora con NTG)
Determinación de electrolitos y coagulación

Valorar ECG inicial de 12 derivaciones y la Historia Clínica

Opresión retroesternal fuerte Dolor pleurítico u Dolor intenso, Dolor pleurítico Ninguno de los
intensidad, equivalente opresivo, cianosis, migra a la espalda. taquipnea, disnea. anteriores con
anginoso. Examen físico taquipnea, PaO2 y Diferencia de Ausencia ruidos ECG normal.
normal, cuarto ruido, PCO2 bajos. pulsos en ambos en un hemitórax Rx tórax normal
estertores. Supradesnivel Segundo ruido brazos. Soplo Rx tórax
del ST o bloqueo rama fuerte. aórtico diastólico neumotórax.
izquierda nuevo. Cambios nuevo Rx tórax -
del ST y la onda T altamente ampliación Posible SCA
sugestivo de isquemia. mediastino. Gastrrointestinal.
Neumotórax Continuar
ECG puede ser normal.
estudio
Embolismo
Pulmonar Disección
Síndrome Aórtica
Coronario
Agudo

371
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El paciente debe ser tratado de acuerdo a las tes se dividen en cinco grupos de acuerdo con
guías diseñadas para cada una de esas afec- los hallazgos clínicos y el ECG según el si-
ciones. Como la enfermedad isquémica car- guiente algoritmo:
díaca es la más frecuente de ellas, los pacien-

Gráfico No. 3

VALORACIÓN DE DOLOR
TORÁCICO

Historia Clínica-
Electrocardiograma

Supradesnivel del ST o Infradesnivel del ST o <30 min síntomas típicos o Diagnóstico Claro No
Síntomas Típicos
Bloqueo de Rama Izquierda Inversión onda T o Enfermedad atípicos prolongados, ECG Relacionado con
Cambios mínimos ECG
Nuevo Coronaria conocida no diagnóstico, no historia Síndrome Coronario
o ECG normal
Síntomas Típicos Síntomas Típicos de enfermedad coronaria Agudo

ALTA PROBABILIDAD ALTA PROBABILIDAD


INFARTO DEL ANGINA INESTABLE PROBABILIDAD BAJA
MIOCARDIO ANGINA INESTABLE DOLOR TORÁCICO
ALTO RIESGO O O MODERADA DE NO CARDIACO
CON ONDA Q BAJA PROBABILIDAD
IM NO Q ANGINA INESTABLE
INFARTO

NIVEL 1 NIVEL 2 NIVEL 3 NIVEL 4 NIVEL 5

Paraclínicos de acuerdo a Dx Valoración


REPERFUSIÓN UCI UNIDAD INTERMEDIA OBSERVACIÓN especialidad correspondiente
HOSPITALIZAR UCI TRATAMIENTO INTENSIVO TELEMETRÍA 23 H 6 a 9 HORAS Hospitalización servicio correspondiente
Remisión a consulta dolor torácico

Paciente elegible No elegible para CPKT-mb seriada CPKT-mb seriada CPKT-mb seriada
reperfusión reperfusión Troponina (Máximo 2) Troponina Troponina
(Menos de 12 horas) (Más de 12 horas) ECG Seriado ECG Seriado ECG Seriado

Choque Asa - NTG -


Asa - NTG Asa - Heparina Asa - Heparina
Cardiogénico o CI Heparina
Betabloqueador NTG Betabloqueador
trombolisis? SI: Betabloqueador
IECA Betabloqueador Reposo
ANGIOPLASTIA Inhibidor GP IIb/IIIa
Estatina Reposo
PRIMARIA IECA-Estatina

Hemodinamia Marcadores
Si hay dolor Coronariografía o Marcadores Marcadores Marcadores
disponible <30 negativos o ECG
recurrente Estratificación no positivos o cambios negativos o ECG positivos o cambios
min? SI: sin cambios
Hemodinamia Invasiva de ECG sin cambios de ECG
ANGIOPLASTIA asintomático
asintomáticos
PRIMARIA

Otros Prueba de Prueba de


Cambiar a estrés MIBI en Cambiar a estrés MIBI en
pacientes:
nivel 1 o 2 reposo si tiene nivel 1 o 2 reposo si tiene
TROMBOLISIS
dolor dolor

372
CAPÍTULO I: DOLOR TORÁCICO

PACIENTES DE RIESGO
INTERMEDIO O BAJO:

En el gráfico No. 4 se resumen las claves diag-


nósticas y en la tabla No. 2 otras causas extra-
cardíacas del dolor torácico.

Gráfico No. 4 ALGORITMO PARA EL DIAGNÓSTICO DE DOLOR TORÁCICO

Dolor torácico:
Intensidad?
Duración?
Localización?
Irradiación?
Cambios con la posición o el movimiento?
Influenciado por la ingesta de comida o líquidos?
Reacción a la nitroglicerina?

Dolor cutáneo Dolor Visceral

Cardiaco No cardíaco
Músculo
Esqueleto
Piel

No isquémico Pulmón
Isquémico
Gastrointestinal
Aorta
Mediastino
Psiquiátrico
Miocarditis
Infarto Agudo Miocardio Cardiomiopatía
Síndrome Coronario Pericarditis
Agudo

373
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Tabla No 2. DOLOR TORÁCICO (DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL)

Enfermedad Signos y síntomas diferenciales


Reflujo gastroesofágico No cambios electrocardiográficos.
Espasmo esofágico Pirosis.
Empeora al acostarse pero también con el esfuerzo.
Causa común de dolor torácico.
Embolismo pulmonar No congestión pulmonar en radiografía.
Puede simular infarto inferior: elevación del ST en DII, DIII, (AVF).
PaO2 y PaCO2 disminuidos.
Hiperventilación.
Hiperventilación Síntoma principal: disnea.
Frecuentemente pacientes jóvenes.
Adormecimiento de las manos, mareo.
PaCO2 disminuido, PaO2 normal o elevado.
Una enfermedad orgánica puede ser la desencadenante.
Neumotórax espontáneo Disnea es el síntoma principal.
Cambios en radiografía y la auscultación.
Dolor localizado en un hemitórax y limita la respiración.
Disección aórtica Dolor severo que migra a la espalda.
Disección tipo A: algunas veces obstrucción del ostium coronario derecho con signos de infarto
inferoposterior.
A veces mediastino amplio en radiografía de tórax.
Soplo de regurgitación aórtica de reciente aparición.
Pericarditis Empeora con la respiración, mejora al sentarse y empeora al acostarse.
Frote pericárdico.
Elevación generalizada del ST sin depresión recíproca.
Pleuritis Dolor tipo punzada con la inspiración.
Tos es el síntoma más frecuente.
Cambios en la radiografía de tórax.
Costocondral Dolor a la palpación.
El dolor puede cambiar con la respiración.
Herpes Zoster temprano No cambios electrrocardiográficos.
Rash o erupción ampollosa.
Parestesia localizada antes del rash.
Extrasístoles Transitorias a nivel del ápex.
Úlcera péptica, colecistitis Dolor en epigastrio.
Dolor intenso abdominal a la palpación.
El infarto inferior puede simular un abdomen agudo.
Depresión Sensación de pesadez continua en tórax.
No relacionado con ejercicio.
ECG normal.
Isquemia miocárdica Dolor opresivo retroesternal de fuerte intensidad con síntomas disautonómicos, irradiado a man-
díbula, cuello, hombros, ambos brazos o la espalda.
Presencia de factores de riesgo o antecedentes de enfermedad coronaria, ACV, enfermedad
arterial periférica.
Supradesnivel o infradesnivel deel ST o inversión de la onda T.
Pocos pacientes pueden tener ECG normal.

374
CAPÍTULO I: DOLOR TORÁCICO

EXÁMENES COMPLEMENTARIOS Otros. Gases arteriales, química sanguínea


(hemograma completo, creatinina, glicemia),
Electrocardiograma: necesario para identi- tomografía axial computadorizada (TAC) o
ficar isquemia miocárdica o también hipertro- resonancia nuclear magnética si se sospecha
fia ventricular izquierda, bloqueo de rama o disección aórtica; gammagrafía pulmonar o
sobrecarga ventricular derecha en pacientes TAC para descartar tromboembolismo pulmo-
con embolismo pulmonar. La elevación locali- nar; prueba de estrés con ejercicio en pacien-
zada del ST es diagnóstica de IAM en 80% a tes seleccionados. La perfusión con radioisó-
90% de los casos. Sin embargo, sólo el 30- topos (isonitrilos Tc99m) es útil para detectar
40% de los pacientes con dolor torácico que isquemia miocárdica. El ecocardiograma pue-
tienen un IAM presentan inicialmente dicha de mostrar zonas de hipoquinesia en pacien-
elevación. Cerca de un tercio de los pacientes tes con infarto previo. El ecocardiograma
admitidos a urgencias por dolor torácico tienen transesofágico es el método de elección para
un ECG normal; de ellos, entre el 5% y el 40% el diagnóstico de disección aórtica, con sen-
desarrollarán un IAM. El pronóstico a corto y sibilidad y especificidad cercanas al 98%.
a largo plazo dependerá del ECG inicial el cual
sirve, además, para decidir tratamiento rápi-
do según las guías preparadas al efecto.
LECTURAS RECOMENDADAS
Marcadores cardíacos: los marcadores bio-
químicos sirven para detectar o excluir necro- 1. Bernal M. Prevención de enfermedad coronaria.
sis miocárdica. Las más usadas son la tropo- Rev Col Cardiol 2001; 8: 36-39.
nina, la creatinfosfoquinasa y la mioglobina. 2. Braunwald E., Antman EM, Beasley JW, et al.
La mioglobina, determinada entre 3 y 6 horas ACC/AHA Guidelines for the management of
patients with unstable angina and non ST-segment
después del episodio, tiene un valor predictivo
elevation myocardial infarction. A Report of the
negativo de 89%. American College of Cardiology/American Heart
Association Task Force on Practice Guidelines.
Radiografía de tórax. Debe practicarse ruti- JACC 2000; 36:970-1062.
nariamente en pacientes con dolor torácico en 3. Erhardt L, Herliz J, Bossaert MH, et al. Task Force
urgencias, 25% de ellos mostrarán signos de on management for chest pain. European Heart
edema pulmonar, neumonía o cardiomegalia. Journal 2002; 23:1153-1176.
La radiografía de tórax no es necesaria en pa-
cientes definidos como de bajo riesgo.

375
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO II

Síndromes coronarios agudos

Mónica Jaramillo, MD
Instituto de Enfermedades Cardiovasculares
Fundación Santa Fe de Bogotá

L as presentaciones clínicas de la enferme-


dad isquémica cardiaca incluyen:
la práctica se encuentran dos categorías de
pacientes:

1. Angina de pecho estable. 1. Pacientes en quienes se sospecha un sín-


2. Isquemia silenciosa. drome coronario agudo, con dolor torácico
3. Angina inestable. en el momento de la consulta y elevación
4. Infarto del miocardio. persistente del segmento ST o bloqueo re-
5. Falla cardiaca. ciente de rama izquierda. La elevación del
6. Muerte súbita. segmento ST generalmente refleja una
oclusión coronaria aguda total. El objetivo
“Síndrome coronario agudo” es el término que terapéutico es la recanalización rápida,
se refiere a cualquier constelación de síntomas completa y sostenida por medio de trata-
clínicos compatibles con isquemia miocárdica miento fibrinolítico o de angioplastia
aguda; comprende la angina inestable y el in- primaria.
farto agudo del miocardio. Es causa recono-
cida de un elevado número de consultas en 2. Pacientes que consultan por dolor torácico
los servicios de urgencias. y anormalidades del ECG que sugieren is-
quemia miocárdica aguda. No tienen eleva-
Por muchos años la angina inestable se ha ción persistente del segmento ST, pero pue-
considerado un síndrome intermedio entre la den presentar depresión del mismo, per-
angina crónica estable y el infarto agudo del sistente o transitoria, o inversión de la onda
miocardio. La angina inestable y el infarto del T, aplanamiento de las ondas T o cambios
miocardio en evolución comparten un sustrato electrocardiográficos no específicos; pue-
anatómico común, y se ha demostrado que den tener ECG normal. Los pacientes con
son presentaciones clínicas diferentes que anormalidades electrocardiográficas pero
resultan de un mecanismo común fisiopatoló- sin síntomas también deben ser incluidos
gico, principalmente la ruptura o erosión de en esa categoría. La estrategia en estos
una placa aterosclerótica, con diferentes gra- casos es mejorar la isquemia y sus sínto-
dos de trombosis local y embolización distal. mas, observar al paciente, tomar ECG
seriados, medición repetida de marcado-
Se han desarrollado criterios clínicos que per- res de necrosis cardiaca (troponina y
miten tomar decisiones tempranas y elegir el CPKmb) e iniciar el tratamiento adecuado
mejor tratamiento con base en la estratifica- si se confirma el diagnóstico.
ción de riesgo y objetivos de intervención. En

376
CAPÍTULO II: SÍNDROMES CORONARIOS AGUDOS

Figura 1. Espectro del Síndrome Coronario Agudo

FISIOPATOLOGÍA do. Parece ser más frecuente en mujeres.


Cuando ocurre la erosión, un trombo se ad-
Los síndromes coronarios agudos se deben hiere a la superficie de la placa, mientras
a reducción aguda o subaguda de la suplen- que cuando hay ruptura de la placa, el trom-
cia primaria de oxígeno al miocardio, provo- bo involucra las capas más profundas de
cada por la ruptura de una placa ateroscleró- la placa bajo el centro lipídico, lo cual hace
tica asociada a trombosis, vasoconstricción y que la placa crezca rápidamente.
embolización.
Inflamación. La capa fibrosa usualmente tie-
Ruptura y erosión de la placa. La ateroscle- ne alta concentración de colágeno tipo I y pue-
rosis no es un proceso de progresión conti- de soportar el estrés sin romperse. La infiltra-
nua, sino una enfermedad con fases alternas ción por macrófagos es la causa principal de
de estabilidad e inestabilidad. Los cambios desestabilización de la placa y su presencia
súbitos e impredecibles están relacionados refleja un proceso inflamatorio que también
con la ruptura de la placa, que puede resultar se caracteriza por la presencia de linfocitos
de la combinación de varios de los siguientes T-activados en el sitio de la ruptura de la placa.
mecanismos:
Trombosis. La ruptura o erosión de la placa
• Ruptura activa, que está relacionada con induce la formación de trombo, ricos en pla-
la secreción de enzimas proteolíticas por quetas, que puede producir cambios rápidos
los macrófagos, lo cual puede debilitar la en la severidad de la estenosis y resultar en
capa fibrosa. oclusión subtotal o total del vaso. La trombo-
• Ruptura pasiva, que se relaciona con fuer- lisis espontánea puede explicar episodios tran-
zas físicas sobre el punto más débil de la sitorios de oclusión/suboclusión trombótica del
capa fibrosa. vaso y los síntomas transitorios asociados, así
• Erosión. Ha sido descrita como uno de los como los cambios electrocardiográficos. El
mecanismos en síndrome coronario agu- trombo localizado sobre el sitio de la ruptura

377
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de la placa puede fragmentarse en pequeñas 5. La llamada “angina secundaria”, en la cual


partículas, migrar y ocluir arteriolas y capilares. una causa extrínseca al lecho arterial coro-
nario precipita la angina. Estos pacientes
Vasoconstricción. Los trombos ricos en pla- tienen estenosis coronarias limítrofes y fre-
quetas liberan sustancias vasoconstrictoras cuentemente tienen angina crónica esta-
como serotonina y tromboxano A2 que inducen ble. La angina inestable es precipitada por:
vasoconstricción en el sitio de ruptura de la • Aumento de los requerimientos de oxí-
placa o en la microcirculación. geno, tales como fiebre, taquicardia y
tirotoxicosis.
Miocardio. En la angina inestable el miocardio • Disminución de flujo coronario, como en
puede ser normal o sufrir varios grados de ne- hipotensión arterial.
crosis; algunos pacientes pueden tener áreas • Disminución de la entrega de oxígeno
locales de necrosis celular dependiente de la al miocardio, como en anemia o
arteria afectada. Esto puede ser detectado por hipoxemia.
la elevación de la troponina, que tiene pro-
nóstico clínico no favorable e implicaciones
clínicas importantes para el manejo práctico PRESENTACIÓN CLÍNICA
del paciente.
Las principales presentaciones de la angina
inestable e infarto del miocardio sin elevación
ANGINA INESTABLE E INFARTO DEL del ST son:
MIOCARDIO SIN ELEVACIÓN DEL ST
1. Angina en reposo: en reposo y prolonga-
CAUSAS da, usualmente de más de 20 minutos de
duración.
La angina inestable y el infarto sin elevación 2. Angina de reciente comienzo: angina de
del ST se caracterizan por desequilibrio entre reciente aparición, severa, con clase fun-
la entrega y la demanda de oxígeno miocár- cional al menos de III en la clasificación de
dico. Las causas son: la Sociedad Canadiense de Cardiología
(con mínimos esfuerzos o que limiten las
1. La más común, perfusión miocárdica redu- actividades diarias normales de los
cida por el estrechamiento de una arteria pacientes).
coronaria a causa de un trombo no oclusi- 3. Angina en “crescendo”: angina diagnos-
vo que se desarrolla sobre una placa ate- ticada previamente que ha llegado a ser
rosclerótica erosionada o rota. más frecuente, mayor en duración o se des-
2. Menos común es la obstrucción dinámica, encadena con umbral menor.
causada por espasmo local severo de un 4. Angina postinfarto: se presenta en las
segmento de una arteria coronaria. seis primeras semanas después de un in-
3. El estrechamiento progresivo severo sin farto del miocardio.
espasmo o trombosis. Esto ocurre en pa-
cientes con aterosclerosis progresiva o con La presentación de los síndromes coronarios
reestenosis después de angioplastia o de agudos varía ampliamente en síntomas. Pue-
la colocación de un stent intracoronario. de encontrarse dolor precordial típico. El do-
4. Inflamación arterial con ruptura y trombo- lor prolongado se observa en el 80% de los
sis secundaria. pacientes, mientras que la presentación de

378
CAPÍTULO II: SÍNDROMES CORONARIOS AGUDOS

reciente comienzo o en “crescendo” en el 20% datos. Los cinco datos relacionados con la
de ellos. Sin embargo, las presentaciones probabilidad de isquemia, en orden de im-
atípicas no son infrecuentes. Ellas se obser- portancia, son: el tipo de síntomas angino-
van en los individuos más jóvenes, menores sos, la historia previa de enfermedad coro-
de 40 años, o en los mayores de 75 años, en naria, el sexo, la edad y el número de facto-
diabéticos y en las mujeres. Las presentacio- res de riesgo tradicionales presentes.
nes atípicas incluyen dolor epigástrico, indi-
gestión, dolor torácico tipo punzada, dolor 2. Examen físico. Usualmente es normal,
torácico pleurítico o disnea en aumento. incluyendo el examen del tórax, la auscul-
tación cardiaca, la frecuencia cardiaca y la
presión arterial. El propósito de este exa-
EVALUACIÓN INICIAL men es la exclusión de causas no cardiacas
de dolor torácico, alteraciones cardiacas no
La evaluación inicial debe comprender histo- isquémicas (pericarditis, enfermedad val-
ria clínica, examen físico y electrocardiogra- vular), descartar entidades no cardiacas
ma que permitan excluir dolor no isquémico. que pueden amenazar la vida del paciente
como disección aórtica, neumotórax a ten-
1. Historia clínica inicial. Además del tipo de sión o tromboembolismo pulmonar, causas
dolor, su duración, localización, irradiación extracardiacas precipitantes. También debe
y síntomas asociados es importante cono- buscarse inestabilidad hemodinámica, sig-
cer los antecedentes, pues la probabilidad nos de disfunción ventricular izquierda y
de enfermedad coronaria como causa del presencia de arritmias que son útiles para
dolor puede determinarse a partir de estos clasificar el riesgo del paciente.

Tabla No. 1. Probabilidad de enfermedad coronaria significativa en pacientes con signos y síntomas sugestivos de angina
inestable. Tomado de Braunwald E, Mark DB, Jones RH, et al. Unstable Angina: Diagnosis and Management. Rockville, MD.
Agency for Health Care Policy and Research and the National Heart, Lung, and Blood Institute; 1994; AHCPR Publication
No. 94-0602.

PROBABILIDAD ENFERMEDAD CORONARIA SIGNIFICATIVA EN PACIENTES CON SIGNOS


Y SÍNTOMAS SUGESTIVOS ANGINA INESTABLE
Alta probabilidad Probabilidad intermedia Probabilidad baja
Cualquiera de los siguientes hallazgos: Ausencia de los síntomas de alta proba- Ausencia de marcadores de probabili-
Historia antigua de enfermedad coro- bilidad y cualquiera de los siguientes: dad alta o intermedia.
naria, incluyendo infarto. Dolor torácico o en brazo izquierdo como Dolor torácico, probablemente no angina.
Dolor torácico o brazo izquierdo como síntoma principal. Un factor de riesgo diferente a diabetes
síntoma principal, semejante a angina Edad >70 años.Sexo masculino.Diabetes mellitus.
previa documentada. mellitus. Uso de cocaína reciente.
Regurgitación mitral transitoria, hipo- Enfermedad vascular extracardiaca. Onda T plana o invertida < 1 mm en de-
tensión, diaforesis, edema pulmonar o Ondas Q antiguas.Segmentos ST u on- rivaciones con onda R dominante. ECG
estertores. Arritmias. das T anormales, que no se documenten normal.
Desviación del segmento ST nueva o que son nuevas.
presumiblemente nueva ( 0,05 mV) o Probablemente no angina en pacientes
inversión de la onda T ( 0,2 mV) con con dos o mas factores de riesgo
los síntomas. coronario.

379
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

3. Electrocardiograma. Un electrocardiogra- tradicionales como la creatinfosfoquinasa


ma en reposo, y ojalá cuando está presen- (CPK) o su isoenzima MB. La elevación de
te el dolor, es la herramienta más útil en la la troponina refleja necrosis miocárdica ce-
valoración de pacientes con dolor torácico. lular. Debe recordarse que las troponinas
Los cambios en el ST y la onda T son los elevadas significan daño miocárdico, pero
indicadores electrocardiográficos más con- no necesariamente secundario a enferme-
fiables de enfermedad coronaria inestable. dad coronaria aterosclerótica y pueden en-
contrarse elevadas en entidades como fa-
4. Marcadores bioquímicos de daño mio- lla cardiaca severa, hipertensión arterial no
cárdico. Las troponinas cardiacas T o I son controlada, hipotensión arterial sostenida,
los marcadores específicos, el “patrón oro”, hipotiroidismo, choque séptico, miocarditis
de necrosis miocárdica; son más específi- después de cardioversión y tromboembolis-
cos y exactos que las enzimas cardiacas mo pulmonar.

Tabla 2. Marcadores cardíacos bioquímicos para la evaluación y manejo de pacientes en quienes se sospecha que están
cursando con síndrome coronario agudo sin elevación del ST en el ECG de 12 derivaciones.

MARCADORES BIOQUÍMICOS

Marcador Ventajas Desventajas Recomendación clínica


Troponina cardíaca 1. Herramienta poderosa para la 1. Baja sensibilidad en las fases Útil como prueba única
estratificación. muy tempranas del infarto (<6 para diagnosticar infarto
2. Mayor especificidad y especi- horas después del inicio de los sin elevación del ST, con
ficidad que la CK-MB. síntomas). mediciones seriadas.
3. Detección de IMA hasta dos 2. Capacidad limitada para detec-
semanas después de un infar- tar reinfarto tardío pequeño.
to agudo.

CK-MB 1. Exámenes rápidos, costo- 1. Pérdida de especificidad en el Estándar previo y perma-


efectivos y exactos. caso de enfermedad musculo- nece como prueba diag-
2. Puede detectar reinfarto tem- esquelético o trauma, incluyen- nóstica en la mayoría de
prano. do cirugía. las circunstancias clínicas.
2. Baja sensibilidad durante IM tem-
Mioglobina 1. Alta sensibilidad. prano (<6 horas) o cuando han No debe ser usada como
2. Útil en la detección temprana pasado más de 36 horas del ini- marcador diagnóstico úni-
de IMA. cio de los síntomas y en caso de co por ausencia de espe-
3. Detección de repercusión. daño miocárdico mínimo. cificidad cardiaca.
4. Su mayor utilidad reside en a. Muy baja especificidad en caso
descartar IMA. de lesión o enfermedad musculo-
esquelético.

380
CAPÍTULO II: SÍNDROMES CORONARIOS AGUDOS

Los marcadores bioquímicos deben interpre- síndrome coronario agudo o síndrome coro-
tarse sobre bases clínicas y electrocardiográ- nario agudo definido (Nivel de evidencia C).
ficas para diferenciar su elevación por causas
diferentes a enfermedad aterosclerótica coro- Los pacientes con síndrome coronario agudo
naria. La troponina empieza a elevarse en san- posible o definido, pero con ECG y marcado-
gre periférica entre 3 y 4 horas y permanece res cardiacos iniciales normales, deben ser
elevada hasta por dos semanas. Se recomien- observados bajo monitorización cardiaca (uni-
da solicitar una troponina al ingreso y repetir- dad de dolor torácico) y repetir ECG y marca-
la a las 12 horas, si la primera fue normal y se dores cardiacos 6 a 12 horas después (Nivel
tomó antes de 6 horas de inicio de los sínto- de evidencia B).
mas. La elevación de la troponina tiene impor-
tantes implicaciones pronósticas y sirve de Si el ECG y los marcadores cardiacos de se-
guía para las decisiones terapéuticas. La crea- guimiento son normales, una prueba de estrés
tinfosfoquinasa (CPK) y su isoenzima MB tie- debe ser realizada en el servicio de urgencia
nen varias limitaciones que reducen su especi- o en la unidad de dolor torácico. En pacientes
ficidad para necrosis miocárdica, pues se ele- con bajo riesgo y baja probabilidad de síndro-
va con el daño del músculo esquelético. El me coronario agudo se puede realizar la
uso del nivel absoluto de CK-MB 2 mayor de prueba de estrés ambulatoria (Nivel de evi-
1U/L y la razón de CK-MB2 a CK-MB1 >1,5 dencia C).
tienen buena sensibilidad para el diagnóstico
de IM en las primeras 6 horas. Su elevación Pacientes con diagnóstico definitivo de sín-
se inicia a las 6 horas, alcanza el pico a las 24 drome coronario agudo y con dolor activo,
horas y se normaliza a las 36 horas. Es útil marcadores cardiacos, desviaciones nuevas
para detectar reinfarto después de las 36 ho- del ST, inversiones profundas nuevas de la
ras. La mioglobina no es específica del cora- onda T y anormalidades hemodinámicas de-
zón, es liberada más rápidamente del miocar- ben ser hospitalizados (Nivel de evidencia C).
dio necrosado que las troponinas o la CK y
puede ser detectada rápidamente incluso dos Pacientes con síndrome coronario agudo de-
horas después del inicio de la necrosis miocár- finitivo y elevación del ST deben ser evalua-
dica. Por su alta sensibilidad, una prueba ne- dos para tratamiento de repercusión inmedia-
gativa para mioglobina, cuando la muestra se ta (Nivel de evidencia A). (Ver guía de Infarto
toma entre las 4 y las 8 horas después del Agudo del Miocardio en esta misma serie).
inicio de los síntomas, descarta un infarto del
miocardio.
EVALUACIÓN DE RIESGO
RECOMENDACIONES Una vez determinado que el paciente está su-
DE TRATAMIENTO INICIAL friendo angina inestable o infarto del miocardio
sin elevación del ST, lo primero que se debe
La historia clínica, el examen físico, un ECG hacer es estratificar su riesgo de infarto o
de doce derivaciones y los marcadores cardia- muerte para determinar el tratamiento más
cos (troponina y CK-MB) deben ser integra- adecuado. Los síndromes coronarios agudos
dos para asignar a los pacientes con dolor comprenden un grupo heterogéneo de pacien-
torácico una de cuatro categorías: diagnósti- tes con presentaciones clínicas diferentes,
co no cardiaco, angina crónica estable, posible quienes tienen diferencias en la extensión y

381
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

severidad de la aterosclerosis coronaria y di- Se han propuesto diferentes escalas para eva-
ferente riesgo de trombosis aguda. Para se- luar el riesgo de estos pacientes. Las más
leccionar el tratamiento adecuado para un pa- aceptadas son:
ciente individual, el riesgo de eventos repeti-
dos debe ser valorado repetidamente. Los hallazgos del estudio PURSUIT asociados
con muerte fueron la edad, la frecuencia car-
La evaluación se debe hacer temprano, en el diaca, la presión sistólica, la depresión del ST,
momento del diagnóstico inicial, basada en la signos de falla cardiaca y la elevación de los
información del ECG y la historia clínica. Esta marcadores cardiacos.
valoración inicial necesita ser modificada a la
luz de los síntomas continuos, información adi- Antman y colaboradores desarrollaron un pun-
cional de evidencia de isquemia en el ECG, taje con 7 variables, (edad mayor de 65 años,
los resultados del laboratorio y la medición de más de tres factores de riesgo, obstrucción
la función ventricular izquierda. Los factores angiográfica previa, desviación del segmento
más importantes en el riesgo son la edad, sexo ST, más de dos episodios de angina en las
masculino, manifestaciones previas de enfer- últimas 24 horas, uso de aspirina en los últi-
medad coronaria, antecedentes de falla car- mos 7 días y elevación de marcadores cardia-
diaca previa, diabetes mellitus o hipertensión cos). El riesgo de eventos adversos (muerte,
arterial, el tiempo desde el inicio de los sínto- reinfarto o isquemia recurrente severa que
mas y el momento de consulta, dolor en repo- requiere revascularización) varió desde 5% a
so, cambios dinámicos del ST y elevación de 41% con el “Puntaje de TIMI” definido como
los marcadores bioquímicos de daño cardiaco la suma de las variables pronósticas individua-
(troponina y CK-MB), así como la presencia les. El puntaje de TIMI es fácil de aplicar y es
de marcadores de inflamación (fibrinógeno y válido para predecir tanto variables individua-
proteína C reactiva). les como el punto final compuesto. Tabla 2.

Figura 2. Puntaje TIMI de riesgo en angina inestable e infarto sin elevación del ST.

382
CAPÍTULO II: SÍNDROMES CORONARIOS AGUDOS

Punto compuesto: mortalidad de toda causa, severa que requiera revascularización urgen-
infarto del miocardio e isquemia recurrente te en los primeros 14 días.

TABLA 2. RESULTADOS PARA LOS COMPONENTES INDIVIDUALES DEL PUNTO FINAL COMPUESTO ESTRATIFICADO
POR EL PUNTAJE TIMI

Resultado Puntaje de Riesgo TIMI en Angina Inestable e IM sin Elevación ST


0-1 2 3 4 4 6-7
Mortalidad total 1,2% 1,0% 1,7% 2,5% 5,6% 6,5%
Infarto del miocardio 2,3% 2,1% 3,7% 5,9% 8,5% 15,8%
Revascularización urgente 1,2% 6,0% 9,5% 12,2% 14,3% 20,9%
Mortalidad total e IM no fatal 2,9% 2,9% 4,7% 6,7% 11,5% 19,4%

En angina inestable e infarto sin elevación del El método más recomendado es la tabla
ST la troponina T o I es predictora fuerte de diseñada por Braunwald y colaboradores.
mortalidad intra hospitalaria shock (6% vs. 2%)
y falla cardiaca congestiva (Antman et al 1996).

TABLA No. 3. RIESGO A CORTO TIEMPO DE MUERTE O IMA EN PACIENTES CON SÍNTOMAS SUGESTIVOS
ANGINA INESTABLE
Hallazgos Alto Riesgo Riesgo Intermedio Bajo Riesgo
Historia Aceleración de síntomas isquémi-Angina de reposo prolongada (> 20 Angina clase funcional III o VI
cos en las últimas 48 horas. minutos), ahora resuelta, pero con en las últimas dos semanas sin
Dolor en reposo, >20 minutos de probabilidad alta o intermedia de dolor en reposo prolongado,
duración, presente en el momen- enfermedad coronaria. pero con probabilidad modera-
to del examen. Angina en reposo (≥20 min o me- da o alta de enfermedad
joró con nitroglicerina). coronaria.
Hallazgos Clínicos Edema pulmonar, más probable- Mayor de 70 años.
mente debida a isquemia. Soplo
cardiaco de insuficiencia mitral IM previo, enfermedad cerebrovas-
nuevo o que empeoró. cular o periférica previa, revascula-
Hipotensión arterial, bradicardia o rización antigua o uso previo de
taquicardia.Mayor de 75 años. aspirina.
ECG Angina en reposo con cambios Inversión de la onda T> 0.02 mV. ECG normal o sin cambios du-
transitorios del segmento ST >0,05 Ondas Q patológicas rante los episodios de dolor.
mV. Normal
Bloqueo de rama izquierda nuevo
o presumiblemente nuevo.
Marcador cardiaco Taquicardia ventricular sostenida. Troponina T o I >0,01 pero <0,1 ng/
Troponina T o I >0,1 ng/Dl. dl.

383
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RECOMENDACIONES camentos que inhiben la trombina directamen-


PARA ESTRATIFICACIÓN TEMPRANA te (hirudina) o indirectamente (heparina no
fraccionada o heparinas de bajo peso mole-
Se debe determinar el riesgo en todos los cular), agentes antiplaquetarios (aspirina, clo-
pacientes con dolor torácico y probable isque- pidogrel y antagonistas de la glicoproteína IIb/
mia aguda para clasificarlos como de alto, IIIa) y/o agentes fibrinolíticos.
mediano o bajo riesgo (Nivel de evidencia C).

1. Los pacientes deben ser estratificados tem- TRATAMIENTO ANTICOAGULANTE


prano enfocando los síntomas anginosos,
hallazgos físicos, hallazgos electrocardio- Los anticoagulantes disponibles para aplica-
gráficos y biomarcadores de daño miocár- ción parenteral incluyen la heparina no frac-
dico (Nivel de evidencia B). cionada, las heparinas de bajo peso molecular
2. Un ECG de doce derivaciones debe obte- y la hirudina; por vía oral están disponibles
nerse inmediatamente (en 10 minutos) en los cumarínicos. La combinación de heparina
pacientes con molestia torácica activa, y con ASA disminuye la tasa de muerte hasta
tan rápido como sea posible en quienes tie- en 54% durante la primera semana, y cuando
nen historia de molestia torácica pero que se combina con heparina de bajo peso mole-
han mejorado en el momento de la evalua- cular y no fraccionada, hasta en 63%. La ma-
ción (Nivel de evidencia C). yoría de los beneficios son a corto plazo y no
3. Marcadores de daño cardiaco se deben se mantienen por largo tiempo. La heparina
medir a todos los pacientes con molestia no fraccionada intravenosa no debe suspen-
torácica compatible con síndrome coronario derse abruptamente a fin de evitar el “efecto
agudo. La troponina es el marcador prefe- de rebote”: debe iniciarse primero heparina
rido, pero la CK-MB también es aceptable subcutánea.
(Nivel de evidencia C).
4. CK total (sin MB), AST, ALT, DHL no están Cuando se usa la heparina no fraccionada con
indicados como marcadores de daño car- inhibidores de la glicoproteína IIb/IIIa se reco-
diaco en pacientes con sospecha de síndro- mienda disminuir el bolo inicial a 50 U/kg y
me coronario agudo (Nivel de evidencia C). mantener el PTT entre 40 y 50.

Inicialmente no se recomendaba el uso de


CUIDADO HOSPITALARIO heparina de bajo peso molecular con inhibido-
res de la glicoproteina IIb/IIIa. Los datos no
Los medicamentos y categorías de tratamiento son definitivos, pero parece que estos dos me-
se pueden dividir en 5 clases: agentes anti- dicamentos pueden ser usados juntos sin evi-
isquémicos, agentes antiplaquetarios y anti- dencia de aumento en el sangrado mayor al
trombina, fibrinolíticos y revascularización comparar la enoxaparina con heparina no
miocárdica. fraccionada.

La dosis de heparina no fraccionada recomen-


TRATAMIENTO ANTIPLAQUETARIO dada es un bolo inicial de 70 U/kg seguido
por infusión a 15 U/kg, titulándola para man-
La formación del trombo puede ser reducida tener el PTT entre 1,5 y 2 veces. La enoxapa-
y la resolución del trombo facilitada por medi- rina se recomienda a dosis de 1 mg/kg SC

384
CAPÍTULO II: SÍNDROMES CORONARIOS AGUDOS

cada 12 horas. Como la excreción de la enoxa- cual los cambios del ST son interpretables.
parina es renal, la dosis debe ser menor en Los pacientes con patrones del ECG que po-
ancianos y pacientes con compromiso renal. drían interferir en la interpretación de los cam-
bios del ST (cambios basales del ST, bloqueo
completo de rama izquierda, Wolf-Parkinson-
TROMBOLISIS White) deben tener una prueba de ejercicio
con imágenes. Los pacientes que no pueden
No es recomendada para pacientes con sín- hacer ejercicio deben tener una prueba de
drome coronario agudo sin elevación del ST, estrés farmacológico con imágenes (medici-
bloqueo de rama izquierda de nueva apari- na nuclear o ecocardiograma).
ción o infarto posterior.

ESTRATEGIAS CONSERVADORA
ESTRATIFICACIÓN DE RIESGO O INVASORA TEMPRANA

El manejo de los pacientes con síndrome coro- En la “estrategia conservadora temprana”, la


nario agudo requiere estratificación de riesgo arteriografía coronaria se reserva para pacien-
continuo. Las metas de las pruebas no inva- tes con evidencia de isquemia miocárdica recu-
soras son determinar la presencia o ausencia rrente (angina en reposo o con mínima activi-
de isquemia en pacientes con baja probabili- dad o cambios dinámicos del segmento ST) o
dad de enfermedad coronaria y estimar el pro- una prueba de estrés fuertemente positiva a
nóstico del paciente. pesar de tratamiento médico intensivo. En la
estrategia “invasora temprana”, cuando no hay
El ECG de ejercicio sigue siendo la prueba contraindicaciones para revascularización mio-
más razonable en quienes pueden hacerlo y cárdica, se recomienda arteriografía coronaria
tienen electrocardiograma en reposo, en el y revascularización dirigida angiográficamente.

Manejo del síndrome coronario agudo

Sospecha clínica de síndrome Elevación Trombolisis o


coronario agudo por el examen persistente angioplastia
físico, ECG y muestras de sangre del segmento ST

Elevación no persistente del


ST o infradesnivel del ST Troponina elevada Bloqueador del inhibidor
Isquemia recurrente glicoproteína IIb/IIIa
Inestabilidad hemodinámica Arteriografía coronaria
Aspirina Arritmia severa
Clopidogrel Preferir enoxaparina
Anaina inestable post-IM
Betabloqueadores
Heparina
Troponina normal Prueba de Estrés antes
en la admisión y 12 horas o después del alta
más tarde

385
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

REVASCULARIZACIÓN Si el paciente presenta dolor anginoso que


MIOCÁRDICA dure más de 2 ó 3 minutos, debe suspender
inmediatamente la actividad que esté practi-
La revascularización miocárdica se refiere a cando. Si el dolor no desaparece inmediata-
la intervención coronaria percutánea o a la mente, debe utilizar dinitrato de isosorbide
cirugía de revascularización miocárdica. Los sublingual. Si el dolor dura más de 15 ó 20
pacientes con anatomía coronaria de alto ries- minutos o persiste a pesar de 3 dosis de dini-
go probablemente se benefician más con la trato de isosorbide sublingual, debe buscar
revascularización, tanto en síntomas como en rápidamente atención médica, llamando una
supervivenciaa a largo plazo. Los procedi- ambulancia o consultando en el servicio de
mientos percutáneos involucran dilatación con urgencias más cercano.
balón seguida de colocación de un stent, lo
cual reduce la probabilidad de cierre agudo Si el patrón de los síntomas anginosos cam-
del vaso y de re-estenosis tardía. Un avance bia (si se ha ce más frecuente, de mayor inten-
importante en la revascularización percutánea sidad, más duradero, aparece con menor es-
ha sido la introducción de los inhibidores de fuerzo o aparece en reposo), el paciente debe
los receptores de la glicocoproteína IIb/IIIa. consultar para valorar la necesidad de trata-
miento adicional o más pruebas.

EGRESO HOSPITALARIO Y CUIDADO Usualmente se recomienda:


AMBULATORIO DESPUÉS DEL EGRESO 1. Aspirina 75 a 325 mg en ausencia de con-
traindicaciones.
La fase aguda de la angina inestable y del in- 2. Clopidogrel 75 mg en ausencia de contra-
farto agudo del miocardio dura aproximada- indicaciones, si la aspirina no es tolerada
mente 2 meses. El riesgo de progresión a in- por hipersensibilidad o intolerancia gástrica.
farto del miocardio o el desarrollo de infarto 3. Combinación de ASA y clopidogrel hasta
recurrente o muerte es mayor en este periodo; por 9 meses en caso de angina inestable o
luego los pacientes tienen curso clínico simi- infarto del miocardio sin elevación del ST.
lar a aquellos con angina estable crónica. 4. Betabloqueadores en ausencia de contra-
indicaciones.
5. Agentes hipolipemiantes y dieta, después
INSTRUCCIONES AL SALIR DEL HOSPITAL de síndrome coronario agudo en pacien-
tes con colesterol de baja densidad por en-
Si el paciente tuvo síndrome coronario agudo cima de 130 mg/dl, inclusive después de
debe asistir a rehabilitación cardiaca. Las ins- revascularización.
trucciones de salida deben ser dadas directa- 6. Agentes hipolipemiantes si el colesterol de
mente al paciente y reforzadas con instruc- baja densidad está por encima de 100 mg/
ciones por escrito. dl después de dieta.
7. Inhibidores de la enzima convertidora de
Las medicaciones requeridas en el hospital la angiotensina en pacientes con falla car-
para controlar la isquemia deben mantenerse diaca, disfunción ventricular izquierda
después de la salida en pacientes que no fue- (FE<40%), hipertensión o diabetes.
ron sometidos a revascularización miocárdica, 8. Modificación de los factores de riesgo car-
con los ajustes que sean necesarios. diovascular, suspensión del tabaquismo y
dieta baja en grasa saturada.

386
CAPÍTULO II: SÍNDROMES CORONARIOS AGUDOS

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Berner ES, Baker CS, Funkhouser E, et al. Do lo- troponin T, CK-MB mass, and myoglobin for
cal opinion leaders augment hospital quality assessing patients with suspected acute coronary
improvement efforts? A randomized trial to promote syndromes in routine clinical practice. Heart 2003;
adherence to unstable angina guidelines. Med 89:280-286.
Care 2003; 41:420-431. 6. Decker WW, Prina LD, Smars PA, Boggust AJ,
2. Bholasingh R, Cornel JH, Kamp O, van Straalen Zinsmeister AR, Kopecky SL. Continuous 12-lead
JP, et al. Prognostic value of predischarge electrocardiographic monitoring in an emergency
dobutamine stress echocardiography in chest pain department chest pain unit: an assessment of
patients with a negative cardiac troponin T. J Am potential clinical effect. Ann Emerg Med 2003;
Coll Cardiol 2003; 41:596-602. 41:342-351.
3. Braunwald E, Antman EM, Beasley JW, Califf RM, 7. Drozdz J, Krzeminzska-Pakula M, Chrzanowski L,
Cheitlin MD, et al. ACC/AHA Guidelines for the et al. Predictors of long term outcome in medically
Management of Patients With Unstable Angina and treated patients with unstable angina. Can J
Non-ST-Segment Elevation Myocardial Infarction. Cardiol 2003; 19:135-139.
A Report of the American College of Cardiology/ 1. Molina D, Chacón A. Papel de las lipoproteínas
American Heart Association Task Force on en enfermedad coronaria. Acta Med Col 2001;
Practice Guidelines JACC 2000; 36:970-1062. 26:173-178.
4. Braunwald E, Antman EM, Beasly JW, Califf RM, 8. Sueda S, Kohno H, Fukuda H, Watanabe K, Ochi
Cheitlin MD, Hochman JS, et al. ACC/AHA N, Kawada H, Uraoka T. Limitations of medical
Guideline Update for the Management of Patients therapy in patients with pure coronary spastic an-
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Elevation Myocardial Infarction (2002). http:// 9. Task Force Report. Management of Acute
www.acc.org/clinical/guidelines/unstable/ Coronary Syndromes without persistent ST
unstable.pdf. elevation. Recommendations of the Task Force
5. Collinson PO, Stubbs PJ, Kessler AC. Multicentre of the European Society of Cardiology. Eur Heart
evaluation of the diagnostic value of cardiac J 2000; 21;1502-15013.

387
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO III

Infarto del miocardio con elevación del ST

Mónica Jaramillo, MD
Instituto de Enfermedades Cardiovasculares
Fundación Santa Fé de Bogotá

DEFINICIÓN PATOGÉNESIS DEL IAM

E l infarto agudo del miocardio (IAM) se de-


fine por sus caracterísiticas clínicas, elec-
trocardiográficas, bioquímicas y patológicas.
El síndrome agudo es causado por reducción
súbita en el flujo sanguíneo coronario, ocasio-
nada a su vez por aterosclerosis con trombo-
Se acepta que el término significa muerte de sis superpuesta, con o sin vasoconstricción
miocitos cardíacos causados por isquemia concomitante. El cuadro clínico y sus conse-
prolongada. cuencias dependerán de la localización de
dicha obstrucción, así como de la severidad y
El electrocardiograma (ECG) puede mostrar duración de la isquemia. En el IAM con eleva-
cambios en el segmento ST y la onda T por ción del ST, la trombosis persistente con oclu-
isquemia, o cambios en el QRS por necrosis sión completa es la causa más frecuente: en
miocárdica. Un infarto en evolución se traduce 68-75% de los casos fatales, ésta es precipi-
en elevación del segmento ST en el punto J, tada por la ruptura de una placa vulnerable.
mayor de 2 mm de V1 a V3 o mayor de 1 mm
en otras derivaciones. Un infarto clínicamente Otros mecanismos son inflamación, erosión
establecido se puede definir como cualquier de la placa y en raras ocasiones, emboliza-
onda Q en derivaciones V1 hasta V3, u onda Q ción. Casi de todos los trombos que evolucio-
mayor de 0,03 segundos en las derivaciones nan a infarto parecen desarrollarse sobre pla-
I, II, aVL, aVF, V4, V5 o V6. Esta guía corres- cas que han venido causando estenosis leve
ponde principalmente a pacientes con eleva- o moderada; sin embargo, aquellas que cau-
ción persistente del ST en el ECG. san obstrucción severa ofrecen más riesgo de
causar eventos agudos.
El IAM también puede confirmarse cuando los
niveles sanguíneos de los marcadores cardía- El infarto causado por oclusión completa de
cos están elevados casi al tiempo o poco des- una arteria coronaria empieza después de 15-
pués de las manifestaciones clínicas de isque- 30 minutos de isquemia severa e irá progre-
mia miocárdica. El marcador preferido es la sando del subendocardio al subepicardio con
troponina I o T, variedades prácticamente es- una evolución que depende del tiempo (el fe-
pecíficas de daño miocárdico. nómeno llamado “del frente de onda”). La re-
perfusión, incluyendo el reclutamiento de co-
laterales, puede salvar porciones de miocardio
a riesgo de necrosarse; ese flujo, subcrítico
pero persistente, puede extender el lapso de

388
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

tiempo en que puede salvarse miocardio me- era trombolítica, mostraron una fatalidad pro-
diante la reperfusión. La circulación colateral medio de 18%. Con el uso amplio de los me-
se da más en las obstrucciones crónicas (edad dicamentos trombolíticos, la aspirina y las in-
avanzada) que en las agudas. tervenciones coronarias precoces, la mortali-
dad total en el primer mes se ha reducido a 6-
7% en estudios clínicos bien valorados.
HISTORIA NATURAL DEL IAM
Estudios comunitarios muestran consistente-
mente que el ataque agudo es fatal entre el FASES DE TRATAMIENTO
30% y el 50% de los casos; la mitad de estas
muertes ocurre en las dos primeras horas. La La primera preocupación del médico debe ser
mortalidad comunitaria no parece haber cam- prevenir la muerte. El personal que cuida a
biado en los últimos 30 años. En contraste, la las víctimas de un IAM debe minimizar las
fatalidad intrahospitalaria sí ha disminuido sig- molestias y el estrés del paciente así como
nificativamente. Antes de generalizarse las limitar la extensión del daño miocárdico.
unidades coronarias la mortalidad intrahospi-
talaria promedio estaba en 25-30%. Estudios El cuidado puede ser dividido en cuatro fa-
practicados ya en los 80s, poco antes de la ses, resumidas así:

TABLA No.1

INFARTO AGUDO DEL MIOCARDIO


FASES DE TRATAMIENTO

FASE 1 FASE 2 FASE 3 FASE 4


CUIDADO DE CUIDADO CUIDADO ESTRATIFICACIÓN
EMERGENCIA TEMPRANO SUBSIGUIENTE DE RIESGO

Diagnóstico Rápido Reperfusión lo más Cuidado Valoración de riesgo


Estratificación rápido posible para de las Medidas para
limitar el tamaño del
Riesgo Temprana complicaciones prevenir la progresión
infarto.
Alivio del Dolor tempranas de la enfermedad
Tratamiento de
Prevención y y tardías. coronaria, la falla
complicaciones como
tratamiento del paro cardiaca y la muerte.
falla de bomba,
cardiaco choque y arritmia

Prehospitalario Servicio de urgencias Cuidado Sala de


o UCI coronario hospitalización

389
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FASE I. CUIDADO DE EMERGENCIA sultados para iniciar el tratamiento. El marca-


dor cardíaco ideal debería ser de aparición cir-
El diagnóstico rápido y la estratificación tem- culatoria temprana, estar en alta concentra-
prana del riesgo en pacientes con dolor torá- ción en el miocardio y estar ausente en otros
cico agudo son esenciales para identificar tejidos no cardíacos, así como persistir el su-
aquellos en quienes intervenciones tempranas ficiente tiempo en sangre para permitir el diag-
pueden mejorar los resultados. nóstico. La creatinina quinasa (CK) y su iso-
enzima (CK-mb) carecen de suficiente sensi-
Historia clínica y examen físico. El diagnósti- bilidad y especificidad. La troponina I y T son
co de IAM se basa en la presencia de dolor específicas del músculo cardíaco y no son de-
torácico severo que dure 20 minutos o más y tectadas en la sangre de sujetos normales;
no responda a nitroglicerina. Claves diagnós- por tanto aumentos, así sean leves, de sus
ticas importantes son los antecedentes de en- niveles, permiten el diagnóstico de celular,
fermedad coronaria (angina inestable) y la irra- siendo específicas de daño miocárdico, y atri-
diación del dolor al cuello, mandíbula, brazo buyéndose a este marcador el papel de nuevo
izquierdo o ambos brazos y ocasionalmente “patrón oro”. Son más específicas y exactas
al epigastrio. El dolor puede no ser muy seve- que las enzimas cardíacas tradicionales como
ro; en ancianos y en mujeres síntomas como la creatinfosfoquinasa (CPK) o su isoenzima
cansancio, disnea, desmayo o síncope pue- MB. Las troponinas elevadas significan daño
den representar equivalentes anginosos. La miocárdico, pero no necesariamente secun-
mayoría de los pacientes presentan palidez y dario a enfermedad coronaria aterosclerótica
diaforesis; algunos están hipotensos, con pul- ya que pueden elevarse en entidades tales
so débil. Hallazgos variables pueden ser bradi- como falla cardíaca severa, hipertensión
cardia o taquicardia, aparición de tercer o cuar- arterial no controlada, hipotensión arterial sos-
to ruidos cardíacos y estertores en las bases tenida, hipotiroidismo, shock séptico o miocar-
pulmonares a la auscultación del tórax. ditis, así como también después de cardio-
versión o de tromboembolismo pulmonar.
Electrocardiograma de doce derivaciones.
Debe tomarse tan pronto como sea posible, La troponina empieza a elevarse en sangre
ojalá antes de 10 minutos. La elevación del periférica 3-4 horas después de la lesión y per-
segmento ST identifica a pacientes que pue- manece elevada hasta por dos semanas. Se
den beneficiarse con terapia de reperfusión recomienda solicitar una troponina al ingreso
temprana. En pacientes con dolor torácico la y repetirla a las 12 horas, por si la primera fue
elevación del ST tiene una especificidad del normal o se tomó antes de 6 horas de inicia-
91% y una sensibilidad del 46% para el diag- dos los síntomas. La elevación de la troponi-
nóstico de IAM. La mortalidad aumenta de na tiene importantes implicaciones pronósticas
acuerdo al número de derivaciones que pre- y sirve de guía para las decisiones terapéuti-
senten elevación del ST. El bloqueo completo cas. En cambio, la creatinfosfoquinasa y su
de rama izquierda de reciente aparición tam- isoenzima MB (CPK-mb) tienen varias limita-
bién es indicativo de IAM. ciones. Niveles mayores de 5 % de CPK-mb
sugieren necrosis miocárdica pero en perso-
Marcadores bioquímicos de daño miocár- nas sanas puede elevarse también con el
dico: se deben tomar muestras de sangre daño de músculo esquelético. El uso del nivel
para marcadores séricos tan pronto como sea absoluto de CK-MB2 mayor de 1U/L y la rela-
posible, pero no debe aguardarse a sus re- ción de CK-MB2 a CK-MB1 > 1.5 tiene buena

390
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

sensibilidad para el diagnóstico de IAM en las de dichos marcadores especialmente en pa-


primeras 6 horas. Su elevación se inicia a las cientes en quienes se sospecha síndrome
6 horas, alcanza el pico a las 24 horas y se coronario agudo, sin elevación del ST en el
normaliza a las 36 horas. Es útil para detectar ECG de 12 derivaciones.
reinfarto después de las 36 horas. La mioglo-
bina no es específica del corazón, es liberada Ecocardiograma transtorácico: El ecocar-
más rápidamente del miocardio necrosado diograma de dos derivaciones es útil en pa-
que las troponinas o la CK y puede ser detec- cientes con dolor torácico agudo. La hipoqui-
tada tan pronto como dos horas después del nesia localizada aparece segundos después
inicio de la necrosis miocárdica. Su valor de la oclusión coronaria y antes de la necrosis;
clínico se reduce por el corto tiempo que per- sin embargo, estas anormalidades no son es-
manece elevada (<24 horas). Por su alta pecíficas de IAM y pueden ser debidas a is-
sensibilidad, sin embargo, una prueba nega- quemia o a infarto antiguo. El ecocardiograma
tiva para mioglobina, cuando la muestra se bidimensional es muy útil para el diagnóstico
toma entre 4 y 8 horas después del inicio de de otras causas de dolor torácico como disec-
los síntomas, permite descartar IAM. La Ta- ción aórtica aguda, derrame pericárdico o
bla No. 2 resume las ventajas y desventajas embolismo pulmonar agudo.

TABLA No. 2- MARCADORES CARDÍACOS BIOQUÍMICOS

Marcador Ventajas Desventajas Recomendación Clínica


Troponina 1. Herramienta poderosa 1. Baja sensibilidad en las fases Útil como prueba única para
Cardíaca para la estratificación muy tempranas del infarto diagnosticar infarto sin
2. Mayor especificidad y (<6 horas después del inicio elevación del ST, con
especificidad que la CK-mb. de los síntomas). mediciones seriadas.
3. Detección de IAM hasta dos 2. Capacidad limitada para
semanas después. detectar reinfarto tardío
pequeño.
CK-mb 1. Exámenes rápidos, costo- 1. Pérdida de especificidad en Estándar previo; permanece
efectivos y exactos. el caso de enfermedad como prueba diagnóstica en
2. Puede detectar reinfarto músculo-esquelética o trauma, la mayoría de las
temprano. incluyendo cirugía. circunstancias clínicas.
2. Baja sensibilidad durante IM
temprano (<6 horas) o cuando
han pasado más de 36 horas
del inicio de los síntomas y
en caso de daño miocárdico
mínimo.
Mioglobina 1. Alta sensibilidad 1. Muy baja especificidad en No debe ser usada como
2. Útil en la detección temprana caso de lesión o enfermedad marcador diagnóstico único
de IMA. músculo- esquelética por ausencia de especifici-
3. Detección de reperfusión. concomitante. dad cardíaca.
4. Su mayor utilidad es
descartar IMA.

391
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RECOMENDACIONES DE CUIDADO DE EMER- (ASA o aspirina) para el tratamiento del IAM,


GENCIA Y ESTRATIFICACIÓN DE RIESGO con disminución del 23% en la mortalidad a
35 días. Cuando se lo combina con estrepto-
La estratificación, útil para detectar pacientes quinasa la reducción de mortalidad es del
de alto riesgo, beneficiables con terapias más 42%. La aspirina reduce la reoclusión corona-
agresivas, consta de: ria y los eventos isquémicos recurrentes des-
pués de la terapia trombolítica con estrepto-
1. Historia clínica, examen físico y electrocar- quinasa o alteplase. Contraindicaciones: no
diograma de 12 derivaciones en los 10 pri- debe ser administrado en pacientes con hiper-
meros minutos del ingreso a urgencias. sensibilidad, úlcera péptica sangrante, discra-
2. Acceso intravenoso y monitoría c ontinua sia sanguínea o enfermedad hepática severa.
de ECG para detección temprana de La dosis oral recomendada es de 160-325 mg
arritmias fatales. cada día, dados tan pronto como sea posible.
3. Si el ECG inicial es normal, deben hacer- El clopidogrel (antiagregante plaquetario sin-
se tomas repetidas si el cuadro clínico tético), 75 mg diarios, puede ser indicación
hace sospechar IAM (uno cada 10 minu-
alterna.
tos hasta que desaparezca el dolor, o to-
mado en tres ocasiones).
4. Toma de muestra para marcadores car- Nitroglicerina: Su uso produce reducción sig-
díacos y paraclínicos iniciales (cuadro nificativa de la mortalidad (cerca de una ter-
hemático, tiempo de protrombina (PT), cera parte); puede ser administrada intrave-
tiempo de tromboplastina (PTT), glicemia, nosa en infartos severos o complicados. La
creatinina, sodio, potasio y CPK total-mb). nitroglicerina está contraindicada en pacientes
No hay que esperar los resultados para con hipotensión (presión arterial sistólica
iniciar el tratamiento de reperfusión. Si no (PAS) menor de 90 mmHg), bradicardia severa
hay elevación del ST en el primer electro- (menos de 50 latidos por minuto) o taquicardia
cardiograma, solicitar troponina I o T. severa. Se inicia a dosis de 0,2 µg/kg/min y
5. Solicitar radiografía de tórax, cuyo resultado se titula lentamente hasta lograr el efecto de-
no debe retardar el inicio de la reperfusión. seado. Debe disminuirse la dosis o suspen-
6. Si hay dudas en el diagnóstico obtener un derse si el paciente desarrolla hipotensión
ecocardiograma bidimensional o imágenes (PAS < 90 mmHg) o si la frecuencia cardíaca
de perfusión miocárdica con radioisótopos aumenta en más de 20 latidos sobre la fre-
(isonitrilos) para decidir conducta. cuencia de base.
7. En caso de paro cardíaco, éste deberá ma-
nejarse de acuerdo con las guías diseña- Alivio del dolor, disnea y ansiedad: Es de
das al efecto. suma importancia, pues la activación simpáti-
ca que producen causa vasoconstricción e
incremento del trabajo cardíaco. Los opioides
TRATAMIENTO PRE-HOSPITALARIO intravenosos (morfina o meperidina) son los
O INTRAHOSPITALARIO TEMPRANO analgésicos más usados, en dosis únicas o
repetidas. Sus efectos secundarios incluyen
Medicamentos de uso rutinario en fases tem- naúsea, bradicardia y depresión respiratoria.
pranas del IAM: La hipotensión y la bradicardia usualmente
responden a su antagonista, naloxona (0,4 a
Acido acetilsalicílico: varios estudios de- 2 mg IV), la cual debe siempre tenerse a mano.
muestran la eficacia del ácido acetilsalicílico Se debe administrar oxígeno por cánula a

392
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

todos, pero principalmente a aquellos pacien- Glucosa-Insulina-Potasio: un metanálisis de


tes con saturación arterial de oxígeno menor 1928 pacientes sugiere una reducción del 28%
de 90% o con congestión pulmonar. A veces en la mortalidad hospitalaria con su adminis-
se hace necesario agregar benzodiacepinas, tración, aunque queda por establecerse su
pero generalmente los opioides son suficien- indicación rutinaria.
tes para tranquilizar al paciente.
Medicamentos antiarrítmicos: la lidocaína
Betabloqueadores: Dados por vía intraveno- puede reducir la incidencia de fibrilación ventri-
sa disminuyen de un 4% a un 3% el riesgo de cular en la fase aguda del infarto, pero también
morir por IAM a los 7 días. En pacientes que aumenta significativamente el riesgo de asis-
reciben tratamiento trombolítico concomitante, tolia. Su uso profiláctico, por tanto, no está
su administración reduce la incidencia de rein- justificado.
farto no fatal y la isquemia recurrente, pudien-
do además reducir la mortalidad si se dan muy Calcioantagonistas: no se deben usar en for-
temprano (menos de 2 horas después del cua- ma profiláctica en la fase aguda del infarto por-
dro agudo). que no se ha demostrado su efecto protector.

Los más usados son el metoprolol y el atenolol Magnesio: tampoco se recomienda su uso
a dosis de 50-100 mg/día y pueden continuar- rutinario pues no se ha confirmado que otor-
se en forma prolongada. Las contraindicacio- gue un beneficio significativo.
nes relativas son: frecuencia cardíaca menor
de 60 por minuto, presión arterial sistólica me-
nor de 100 mmHg, falla cardíaca moderada a RESTAURACIÓN DEL FLUJO CORONARIO Y
severa, signos de hipoperfusión periférica, in- LA PERFUSIÓN TISULAR MIOCÁRDICA
tervalo PR mayor de 240 mseg, bloqueo AV
de segundo o tercer grado, enfermedad En pacientes con IAM y elevación persistente
pulmonar obstructiva crónica severa, antece- del ST o bloqueo reciente de rama izquierda
dentes de asma bronquial, enfermedad arterial deberá practicarse reperfusión temprana, far-
periférica severa y diabetes mellitus insulino- macológica (trombólisis) o mecánica, a menos
dependiente. que existan contraindicaciones claras para
ello.
Inhibidores de la Enzima Convertidora de
la Angiotensina: los IECAs deben ser dados
a pacientes que tienen fracción de eyección TRATAMIENTO FIBRINOLÍTICO (TROMBÓLISIS)
disminuída o que han experimentado falla car-
díaca en la fase temprana. Iniciados desde el El beneficio con el tratamiento fibrinolítico es
primer día, reducen la mortalidad en las próxi- indiscutible si se lo da en las primeras 12 ho-
mas 4-6 semanas en forma modesta, pero sig- ras a partir del inicio de los síntomas. Cuando
nificativa. Una revisión sistemática de estudios se combina con aspirina el beneficio adicio-
con IECAs tempranos indica que esta terapia nal es grande (se previenen aproximadamen-
es segura, bien tolerada y lleva también a re- te 50 muertes por cada 1000 pacientes). La
ducción moderada en la mortalidad a 30 días, mayor disminución de mortalidad se obtiene
obteniéndose el principal beneficio en la pri- en pacientes tratados en las dos primeras
mera semana. horas (44% vs 20%), lo cual justifica, inclusi-
ve, el uso de trombólisis prehospitalaria.

393
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Riesgos de la fibrinolisis: esta terapia se aso- evolución, cuyo ECG muestre elevación del
cia con un pequeño pero significativo exceso ST o bloqueo reciente de rama izquierda, pero
de, aproximadamente, 3,9 accidentes cerebro- sin dolor en el momento de la valoración, se
vasculares (ACV) más por cada 1.000 pacien- les debe practicar fibrinolisis, sobre todo si no
tes tratados, riesgo que es más notable el pri- hay disponibilidad de reperfusión mecánica
mer día del tratamiento. (coronariografía y angioplastia primaria). Lo
mismo opera para los mayores de 75 años. El
Comparación de agentes fibrinolíticos: com- tratamiento fibrinolítico no debe aplicarse a
parada la administración de tromboplastina (t- pacientes cuyo infarto haya transcurrido por
PA), acelerada con la de estreptoquinasa + más de 12 horas, a menos que se demuestre
heparina intravenosa resultó en 10 muertes isquemia activa o angina repetitiva.
menos por cada 1000 pacientes tratados. Con
esta última combinación, el riesgo de sangra- En la tabla No. 3 se ennumeran las contrain-
do es mayor que con la sola estreptoquinasa. dicaciones absolutas y relativas de trombólisis
intravenosa.
Indicaciones: A menos que haya contraindica-
ciones, los pacientes con IAM deben recibir Las dosis de los agentes fibrinolíticos actua-
aspirina y tratamiento trombolítico con el míni- les y la necesidad de tratamiento concomitante
mo retraso. A los pacientes con historia clínica se detallan en la Tabla No. 4.
de dolor torácico de menos de 12 horas de

TABLA No. 3. CONTRAINDICACIONES DE LA TERAPIA FIBRINOLÍTICA

Contraindicaciones Absolutas
Accidente cerebrovascular hemorrágico previo o ACV de origen no conocido, en cualquier momento.
ACV trombótico en los últimos seis meses.
Alteración del sistema nervioso central o neoplasias.
Trauma o cirugía craneana reciente (últimas tres semanas)
Sangrado gastrointestinal durante el último mes.
Desorden de coagulación conocido.
Disección aórtica (aneurisma disecante)

Contraindicaciones Relativas
ACV isquémico transitorio en los 6 meses previos
Tratamiento con anticoagulantes orales
Embarazo o un mes post-parto
Punciones en sitios no compresibles
Resucitación traumática
Hipertensión refractaria (PAS mayor de 180 mmHg)
Enfermedad hepática avanzada
Endocarditis infecciosa
Ulcera péptica activa

394
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

TABLA No. 4: TRATAMIENTOS FIBRINOLÍTICOS PARA EL INFARTO AGUDO DEL MIOCARDIO

Medicamento Tratamiento Inicial Co-terapia antitrombina Contraindicación


Estreptoquinasa 1.5 millones unidades en Ninguna o heparina IV Administración previa
100 ml de D5%AD o SSN por 24 a 48 horas de estreptoquinasa
en 30 a 60 minutos, IV
Actilyse (t-PA) 15 mg IV en bolo Heparina intravenosa
0.75 mg. kg IV en 30 minutos por 24 a 48 horas.
0.5 mg.kg IV en 60 minutos
La dosis total no debe
exceder los 100 mg
Reteplase (r-PA) Dos bolos de 10U+10U Heparina intravenosa por
dados con treinta minutos 24 a 48 horas.
de diferencia
Tenecteplase (TNK-tPA) Bolo intravenoso único: Heparina intravenosa por
30 mg sí < 60 kg 24 a 48 horas.
35 mg sí 60 a < 70 kg
40 mg sí 70 a < 80 kg
45 mg sí 80 a < 90 kg
50 mg sí ≥ 90 kg

Re-administración de tratamiento fibrinolítico: El uso de heparinas de bajo peso molecular


Si hay evidencia de reoclusión o re-infarto, (dalteparina y enoxaparina) al tiempo con
está indicada la repetición de la trombólisis si fibrinolíticos produce menor tasa de reoclusión
aún no existe disponibilidad de reperfusión y reinfarto, pero también ha mostrado aumento
mecánica. Como la estreptoquinasa y la anis- del sangrado intracraneano (al menos en
treplase no deben ser re-administradas porque mayores de 75 años).
los anticuerpos permanecen por 10 años, a
niveles que interfieren con su acción, se debe
repetir la t-PA o una de sus variantes, teniendo INTERVENCIONES CORONARIAS
en cuenta que pueden producir complicacio- PERCUTÁNEAS
nes hemorrágicas.
Las intervenciones percutáneas durante las
Adyuvantes de la fibrinolisis: Los beneficios primeras horas del infarto pueden ser divididas
de la aspirina ya fueron descritos. La heparina en: a. intervención percutánea primaria, b. in-
intravenosa ha sido extensamente usada tervención percutánea primaria combinada
durante y después de la trombólisis, especial- con reperfusión farmacológica y c. angioplas-
mente agregada a la t-PA: al parecer se obtie- tia de rescate, cuando esta última ha fallado.
ne mayor permeabilidad de la arteria cuando
el paciente recibe ambas drogas, las cuales a. Intervención Percutánea Primaria (IPP):
pueden suspenderse después de 24-48 horas. Consiste en angioplastia o colocación de
La combinación con estreptoquinasa no ha stent sin tratamiento fibrinolítico previo o
mostrado mejores resultados. El PTT debe concomitante y es la opción preferida siem-
mantenerse en niveles menores de 70 pre que pueda llevarse a cabo en los prime-
segundos. ros 90 minutos. Requiere de equipo huma-

395
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

no experimentado, que incluye no sólo un CIRUGÍA DE REVASCULARIZACIÓN


cardiólogo intervencionista, sino también MIOCÁRDICA
personal de apoyo entrenado. Tasas meno-
res de mortalidad se observan en centros El número de pacientes que necesitan cirugía
con alto volumen de dicho procedimiento. de revascularización miocárdica en la fase
La implantación rutinaria de stent disminu- aguda del infarto del miocardio es muy
ye la necesidad de revascularización del limitado. Puede estar indicada cuando la IPP
vaso culpable, pero no se asocia con re- fracasa, cuando hay oclusión súbita o ruptura
ducciones significativas en muerte o reinfar- de la arteria durante el cateterismo, o si la IPP
to cuando se la compara con la angioplastia no puede realizarse. También, selectivamente,
primaria. Comparaciones entre esta última en ciertos pacientes con shock cardiológico o
y la trombólisis prehospitalaria, no mues- cuando se la asocia a cirugía para corregir un
tran mayores diferencias en mortalidad. La defecto interventricular o regurgitación mitral
IPP debe ser la preferida en pacientes con debida a ruptura de músculo papilar.
shock cardiogénico.
b. IPPs combinadas con fibrinolisis: la
angioplastia realizada inmediatamente des- FALLA DE BOMBA Y SHOCK
pués de tratamiento fibrinolítico muestra
tendencia al incremento en el riesgo de Las diferentes alteraciones hemodinámicas
complicaciones y muerte; por tanto, no está que pueden aparecer durante el IAM se des-
indicada. La experiencia, la disponibilidad criben en la tabla No. 5.
de stents y el uso de agentes antiplaque-
tarios más potentes han mejorado la seguri- FALLA CARDÍACA
dad de los procedimientos percutáneos
después de fibrinolisis. Puede deberse a complicaciones arrítmicas
c. Intervenciones Percutáneas de Rescate: o mecánicas. La falla ventricular izquierda du-
Se definen como las IP realizadas sobre rante el IAM tiene mal pronóstico a corto y a
una arteria coronaria que permanece ocluí- largo plazo. Los signos clínicos son disnea,
da a pesar del tratamiento fibrinolítico. Los taquicardia sinusal, aparición de tercer ruido
estudios realizados en este campo sugie- y estertores pulmonares. Las medidas genera-
ren efecto benéfico si la arteria culpable lo- les incluyen monitoría cardíaca, seguimiento
gra ser recanalizada mediante angioplastia de anormalidades electrolíticas y de condicio-
o stent. nes concomitantes como disfunción valvular
d. Antagonistas de los Inhibidores de la o enfermedad pulmonar. La congestión pulmo-
glicoproteína IIb/IIIa junto con IPPs: La nar se confirma mediante radiografía de tórax.
administración de abxicimab antes de rea- El ecocardiograma es muy útil para medir la
lizar la angioplastia primaria ha mostrado extensión del daño miocárdico, la función ven-
disminución en las tasas de muerte y rein- tricular izquierda y la presencia de insuficien-
farto, aunque produce un exceso de san- cia mitral con o sin defecto del tabique inter-
grado que puede ser corregido reduciendo ventricular. El grado de falla cardíaca corres-
la dosis de heparina. ponde a la clasificación de Killip, así:

Clase I: No estertores ni tercer ruido


Clase II: Estertores en menos del 50% de los
campos pulmonares o tercer ruido.

396
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

TABLA No. 5. ESPECTRO CLÍNICO DE LOS ESTADOS HEMODINÁMICOS EN INFARTO DEL MIOCARDIO

Normal Presión arterial normal, frecuencia respiratoria y cardíaca normal, buena perfusión distal
Hiperdinamia Taquicardia, ruidos cardíacos de tonalidad alta, buena perfusión periférica.Esta indicado
iniciar betabloqueadores
Bradicardia-Hipotensión “Hipotensión caliente”, bradicardia, venodilatación, presión yugular venosa normal, perfu-
sión periférica disminuida. Usualmente en infarto inferior, pero puede ser desencadenada
por opiáceos. Responde a atropina o marcapasos.
Hipovolemia Venoconstricción, presión yugular venosa baja, mala perfusión tisular periférica.Responde
a infusión de líquidos intravenosos.
Infarto de Ventrículo Derecho Presión venosa yugular elevada, mala perfusión periférica o shock, bradicardia, hipotensión
Falla de Bomba Taquicardia, taquipnea, presión de pulso débil, mala perfusión periférica. Hipoxemia. Shock.
Shock cardiogénico Perfusión periférica severamente disminuida, oliguria, hipotensión severa, presión de pulso
disminuida taquicardia, shock.

Clase III: Estertores en más del 50% de los ña y el débito cardíaco. Si hay hipotensión
campos pulmonares los inotrópicos están indicados. Si hay sig-
Clase IV: Shock cardiogénico, hipotensión ar- nos de hipoperfusión renal, se debe dar do-
terial, hipoperfusión periférica y es- pamina a dosis de 2.5 a 5 µcg/kg/min. Si
tertores en ambos campos pulmo- predomina la congestión pulmonar, también
nares. se indica la dobutamina, iniciada con 2.5
µcg/kg/min, que se pueden incrementar
Deben tomarse las medidas siguientes: cada 5 -10 minutos hasta que llegar a 10
µcg/kg/min o hasta que se observe mejo-
• Falla cardíaca leve o moderadamente seve- ría hemodinámica.
ra: monitorizar la saturación de oxígeno con • Shock cardiogénico: Es un estado clínico
pulso-oxímetro y colocar oxígeno para man- de hipoperfusión caracterizado por presión
tener la SaO2 > 90%. Los casos más leves sistólica <90 mmHg, presiones de llenado
responden a furosemida 20 a 40 mg vía IV ventricular > 18 mmHg o índice cardíaco <
lenta, repetida cada 4 horas si es necesario. 1.8 L/min/m2. Este diagnóstico debe hacer-
Si no hay respuesta se puede agregar ni- se cuando se hayan descartado otras cau-
troglicerina intravenosa, titulada cuidadosa- sas de hipotensión como hipovolemia, re-
mente para evitar la hipotensión. La terapia acciones vasovagales, alteraciones electro-
con IECAs deberá iniciarse dentro de las líticas, efectos secundarios farmacológicos
48 horas siempre que no haya hipotensión, o arritmias. Suele asociarse a compromiso
hipovolemia o falla renal significativa. ventricular izquierdo extenso. La presencia
• Falla Cardíaca severa y shock: Iniciar con simultánea de complicaciones mecánicas
diuréticos y nitroglicerina intravenosos, ini- se descarta con un ecocardiograma trans-
ciando esta última con 0.25µcg/kg/min e in- torácico. El mejor tratamiento es la reperfu-
crementándola cada 5 minutos hasta que sión mecánica, mediante intervención per-
la presión arterial sistólica disminuya 15 cutánea o cirugía. El uso de trombolíticos
mmHg hasta un mínimo de 90 mmHg. Se está indicado sólo cuando ésta no pueda
debe colocar un catéter de arteria pulmonar llevarse a cabo. Los pacientes deben recibir
para monitorizar la presión pulmonar en cu- inotrópicos y se recomienda el uso de balón

397
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de contrapulsación intra-aórtico, a manera Las tablas Nos. 6 y 7 resumen comparativa-


de puente, mientras pueda practicarse la mente el diagnóstico de las diversas condi-
reperfusión mecánica. ciones y su tratamiento inicial:

TABLA No. 6

DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO INICIAL

Perfusión Tisular Perfusión Tisular Adecuada Perfusión Tisular Adecuada


Inadecuada Sin Congestión Pulmonar Con Congestión Pulmonar

Agentes Inotrópicos REPERFUSIÓN Diuréticos


Balón de Vasodilatadores
Contrapulsación Hemodinamia No Hemodinamia

Cateterismo Trombolisis y balón de


Cardiaco Contrapulsación

REVASCULARIZACIÓN Continua shock Mejoría Clínica


MIOCÁRDICA
Quirúrgica o Percutánea

TABLA No 7. RECOMENDACIONES EN FALLA CARDÍACA Y SHOCK CARDIOGÉNICO

Diagnóstico Radiografía de tórax, ecocardiograma, cateterismo de corazón derecho (Swan-Ganz)


Tratamiento Oxígeno por cánula o por venturi
Falla Cardíaca Furosemida: 20 a 40 mg intravenosos repetidos cada 1 a 4 horas si es necesario
Leve o Moderada Nitroglicerina intravenosa o nitratos orales, titulados según presión arterial, manteniendo la
presión arterial sistólica siempre mayor de 90 mmHgInhibidores de la ECA: siempre que no
haya hipotensión, hipovolemia o falla renal
Tratamiento Oxígeno por cánula o máscara de vénturi
Falla Cardíaca Furosemida: 20 a 40 mg intravenosos repetidos cada 1 - 4 horas si es necesario
Severa Nitratos, si no hay hipotensión
Valoración hemodinámica con catéter de arteria pulmonar (Swan-Ganz)
Soporte ventilatorio si la presión arterial de oxígeno es inadecuada, con oxígeno suplementario
Considerar revascularización temprana
Tratamiento Oxígeno por cánula o máscara de vénturi
Choque Cardiogénico Monitoría hemodinámica con catéter de Swan-Ganz
Agentes inotrópicos: dopamina o dobutamina
Agentes vasoconstrictores: noradrenalina o adrenalina IV si hay hipotensión severa.
Soporte ventilatorio si hay hipoxemia severa a pesar de oxígeno suplementario
Balón de contrapulsación intra-aórtica
Dispositivos de asistencia ventricular izquierda y revascularización temprana.

398
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

ARRITMIAS Y ALTERACIONES DE tamiento. Si la frecuencia es muy rápida pue-


LA CONDUCCIÓN INTRACARDIACA de desencadenar falla cardíaca, requiriendo
tratamiento urgente. Los betabloqueadores y
ARRITMIAS VENTRICULARES la digoxina son útiles para disminuir la frecuen-
cia ventricular, pero la amiodarona es más
• Ectopia ventricular, extrasístoles ventricula- efectiva para revertir el ritmo a sinusal. Tam-
res: Aparecen en casi todos los pacientes bién se puede usar la cardioversión eléctrica,
durante el primer día del infarto, a menudo pero hay que anticoagular al paciente antes
como arritmias complejas. No requieren tra- de emplearla.
tamiento específico, a menos que produz-
can compromiso hemodinámico. Se ha de-
mostrado que la administración de lidocaí- BRADICARDIA SINUSAL Y BLOQUEO
na intravenosa disminuye la aparición de CARDÍACO
arritmias pero aumenta el riesgo de
asistolia. La bradicardia sinusal es común en la prime-
• Taquicardia Ventricular: Salvas de taquicar- ra hora, especialmente en el infarto inferior,
dia ventricular no sostenida son bien tole- siendo en algunos casos debida a los opioides.
radas y no siempre necesitan tratamiento. Puede acompañarse de hipotensión severa,
Episodios más prolongados pueden causar en cuyo caso debe tratarse con atropina intra-
hipotensión y falla cardíaca y degenerar en venosa, comenzando con dosis de 0.5 mg
fibrilación ventricular. Los betabloqueado- hasta dosis máxima de 2 mg.
res son el tratamiento de primera línea. Si
el riesgo de fibrilación ventricular recurrente • Bloqueo auriculoventricular de primer gra-
es alto puede darse lidocaína en dosis de do: generalmente se asocia con infarto infe-
1 a 4 mg/min. La amiodarona (5 mg/kg en rior y casi nunca produce compromiso he-
la primera hora, seguida por infusión de 900 modinámico. Si lo produce, está indicada
a 1200 mg en 24 horas), puede ser mejor la aplicación de atropina o la colocación de
en pacientes con taquicardia ventricular marcapasos transitorio.
sostenida recurrente. La cardioversión • Bloqueo auriculoventricular de segundo
eléctrica está indicada en casos de taqui- grado tipo Mobitz II o bloqueo completo:
cardia ventricular con compromiso hemodi- son indicaciones para la implantación de
námico debiéndose practicar desfibrilación marcapasos transitorio. Si el compromiso
inmediata con 200, 300 y 360 Joules. hemodinámico es severo, se debe conside-
rar marcapasos secuencial. La súbita apa-
rición de bloqueo completo de rama o hemi-
ARRITMIAS SUPRAVENTRICULARES bloqueo indican infarto extenso, con alta
probabilidad de progresión a bloqueo com-
La fibrilación auricular, que ocurre en el 15% - pleto y falla de bomba, todo lo cual hace
20% de infartos del miocardio, está usualmen- urgente el marcapasos transitorio.
te asociada a daño ventricular izquierdo se-
vero. Suele ser autolimitada. Los episodios
pueden durar de minutos a horas, siendo ge- INFARTO DE VENTRÍCULO DERECHO (IVD)
neralmente recurrente. En la mayoría de los
casos la frecuencia ventricular no es rápida, Su diagnóstico es importante debido a que se
la arritmia es bien tolerada y no requiere tra- puede presentar con shock cardiogénico. Se

399
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

debe sospechar por la tríada de hipotensión, La tabla No. 8 (algoritmos) resume las con-
campos pulmonares limpios y presión venosa ductas a seguir en el dolor torácico sugestivo
yugular aumentada. La elevación del segmen- de isquemia miocárdica, lo mismo que la es-
to ST en V4R , así como ondas Q y elevación tratificación aguda y no aguda de riesgo en
del ST de V1 a V3 también son diagnósticas, y los casos de IAM.
se confirman con ecocardiograma. Cuando
hay shock o hipotensión, es esencial mante-
ner la precarga ventrícular derecha. Debe evi- LECTURAS RECOMENDADAS
tarse el uso de vasodilatadores como opioides,
nitratos, diuréticos e inhibidores de la ECA. 1. Gibons RJ, Alpert JS, Esgle KA, Gregoratos G,
Los líquidos intravenosos son efectivos en Gardner TJ, Garson A, et al. ACC-AHA Guidelines
muchos casos. El IVD se complica frecuente- for the management of patients with acute
myocardial infarction. www.americanheart.org/
mente con fibrilación auricular, la cual debe
Scientific Statements/ 1999.
corregirse rápidamente; si hay bloqueo AV 2. Peterson ED, Shaw LJ, Califf RM. Risk stratifi-
debe colocarse marcapasos secuencial. Do- cation after myocardial infarction. Clinical Guide-
butamina y dopamina están indicadas en caso lines: Part II. Ann Intern Med. 1997; 126:561-582.
de hipotensión persistente. La reperfusión es 3. Van De Werf F, Ardissino D, Betriu A, et al. Mana-
gement of the acute myocardial infarction in pa-
el tratamiento de elección. tients presenting with ST-segment elevation. The
Task Force on Management of Acute Myocardial
Infarction of the European Society of Cardiology.
Eur Heart J 2003; 24:28-66.

400
CAPÍTULO III: INFARTO DEL MIOCARDIO CON ELEVACIÓN DEL ST

TABLA No. 8

DOLOR TORÁCICO Sugestivo de isquemia

Valoración inmediata (Menos 10 min) Tratamiento General Inmediato


Valoración de signos vitales Oxígeno a 4 litros por minuto
Medir saturación de oxígeno Aspirina 160 a 325 mg
Colocar acceso intravenoso Nitroglicerina SL o IV
Obtener un ECG 12 derivaciones (Revisado por MD) Morfina IV (si dolor no mejora con
NTG) Hacer historia clínica y examen físico corto
Interrogatorio dirigido a Cl de fibrinolisis Memoria MONA: Morfina, Oxige
Evaluación de electrollitos y coagulación Nitroglicerina, Aspirina

Valoración de Electrocardiograma Inicial

Elevación del Sí nuevo o Depresión del ST o ECG no diagnóstico


presumiblemente nuevo Inversión dinámica del ST Angina Inestable riesgo intermedio o
sospechoso de lesión Angina Inestable/IMA sin Bajo
IMA Elevación ST elevación del ST
Reúne criterios de
angina inestable o
Iniciar Tratamiento Adjunto Iniciar Tratamiento Adjunto angina nuevo inicio o
-bloqueadores IV Heparina (NF, BPM) troponina positiva?
Heparina IV Nitroglicerina IV SÍ
Nitrroglicerina IV Aspirina 160 a 325 mg
IFCAs -bloqueadores IV Admitir a Unidad Dolor
Inhibidores Glicoproteína IIb/IIIa Torácico (UDI)
O cama monitorizada:
Marcadores cardiaco
Tiempo inicio síntomas Valorar estado clínico seriado
ECG seriado - Monitoría
> 12 h continua de ST,
< 12 h
Paciente Alto Riesgo Considerar estudio con
Síntomas ecocardiograma
Estrategia reperfusión Si hay signos de
shock Persistentes
- Angiografía
cardiogénico o Isquemia
- Intervención Evidencia de Isquemia
CI llevar a Recurrente
Percutánea (IP) o Infarto
librinolisis. IPC es Función
(Angioplastia y/o
de elección si ventricular
stent)
está disponible, izquierda
- Cirugía
angiooplastia, deprimida No
cardiovascular Estable
fibrinolisis Cambios isquemia
clínicamente
salida

Coronariografía
Terapia Fibrinolítica Selección de IPC primaria Anatomía Admitir a UCI
Actylise o Hacerse en 90 ± 30 favorable para Continuar
estreptoquinasa o minutos N
revascularización O
tratamiento
APSAC o, Releplase o, Operadores adyuvante
Tenecteplase experimentados Marcador

Meta <30 minutos desde Centro alto-volumen cardiaco seriado
la puerta a la aguja Capacidad de cirugía ECG seriado
Considerar
Revascularización ecocardiograma
IPP
Cirugía

401
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IV

Arritmias

Mario Bernal, MD
Jefe Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

María de los Angeles Roversi, MD


Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades (Escuelas) de Medicina

TAQUIARRITMIAS

L as taquiarritmias pueden dividirse según


el compromiso del estado circulatorio en:
quieren cardioversión eléctrica inmediata co-
mo parte del tratamiento. Dentro de este grupo
se encuentran los siguientes tipos de arritmia:
1. Taquicardias inestables.
2. Taquicardias estables. • Taquicardia de complejo QRS estrecho.
• Fibrilación auricular/Aleteo auricular.
La taquicardia inestable es aquella que se aso- • Taquicardia ventricular estable: taquicardia
cia con síntomas o signos graves. Se conside- ventricular monomorfa y taquicardia ventri-
ran síntomas graves el dolor torácico, la disnea cular polimorfa.
y la alteración del estado de conciencia. Los • Taquicardia de complejo ancho indetermi-
signos graves son estertores, hipotensión, in- nada.
gurgitación yugular, ortostatismo y alteracio-
nes en el electrocardiograma. Para ser cata- En las siguientes gráficas se muestran los
logada como inestable, la taquicardia debe ser algoritmos de manejo de la taquicardia ines-
la causa de los síntomas y signos. El trata- table y de la taquicardia estable. Los algorit-
miento debe realizarse de forma inmediata con mos de esta guía son tomados de American
cardioversión eléctrica sincronizada. Heart Association. Guidelines 2000 for Car-
diopulmonary Resuscitation and Emergency
Las taquicardias estables son aquellas que no Care Cardiovascular. Circulation 2000;102
presentan signos o síntomas graves. No re- (suppl):1-382.

402
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

Figura 1. Algoritmo para manejo de la taquicardia inestable

Taquicardia
Signos y síntomas graves

Frecuencia ventricular > 150 lpm


Preparar para cardioversión

Tener a la cabecera del paciente


• Monitor de saturación de oxígeno
• Dispositivo de aspiración
• Vía IV
• Equipo de premedicación

Premedicar siempre que sea posible

Cardioversión sincronizada Dosis de energía


• TV de 100 J, 200 J, 300 J,
• TSVP 360 J
• FA
• Aleteo auricular

TV = Taquicardia ventricular TSVP=Taquicardia supraventricular paroxística FA= Fibrilación Auricular

403
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Figura 2. Algoritmo para manejo de la taquicardia estable

Paciente estable sin signos ni


síntomas graves

Taquicardia
TV complejo TV monomorfa
FA/Flutter de complejo
ancho estable estable
estrecho

Ver Ver algoritmo


Ver algoritmo Ver algoritmo
algoritmo TV complejo
TV estable TV estable
FA/Flutter estrecho

TV = taquicardia ventricular.
FA = fibrilación auricular

FIBRILACIÓN AURICULAR/ FIBRILACIÓN AURICULAR AGUDA


FLUTTER AURICULAR
Es la actividad auricular rápida, irregular y
“FLUTTER” O ALETEO AURICULAR caótica de menos de 48 horas de evolución.
Tiene una incidencia de 3 por 1000/año a la
El “flutter” o aleteo auricular puede aparecer edad de 55 años y de 38 por 1000 a la edad
en presencia de enfermedades que producen de 94 años. Es más frecuente en hombres y
daño del músculo cardíaco como el infarto en atletas. Se asocia con múltiple patologías
agudo del miocardio o la miocarditis. como enfermedad coronaria, hipertensión, en-
fermedad valvular cardiaca, tromboembolismo
El electrocardiograma muestra una frecuen- pulmonar, intoxicación por alcohol, pericardi-
cia auricular de 250-350 latidos/minuto con tis e hipertiroidismo.
una frecuencia ventricular de 150 latidos/mi-
nuto. Es característico el trazado con ondas El pulso es irregularmente irregular. Pueden
auriculares con forma de sierra simétricas. observarse signos de falla cardiaca descom-
pensada como resultado de la pérdida de la
El diltiazem, el verapamilo y la procainamida “patada” auricular que favorece el llenado ven-
pueden convertir el flutter auricular a ritmo tricular durante la diástole. Esta situación es
sinusal. El tratamiento se hace en forma simi- más frecuente cuando la función del ventrículo
lar a la fibrilación auricular. izquierdo se encuentra deteriorada.

404
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

En el electrocardiograma no se encuentran Falla cardíaca (fracción de eyección menor


ondas P, el intervalo RR es irregular y no hay de 40% o signos de insuficiencia cardiaca
correspondencia entre cada onda P y el com- congestiva): para controlar la frecuencia car-
plejo QRS subsiguiente. diaca cuando la FA/Flutter ha estado presen-
te por más de 48 horas se utiliza digoxina, o
amiodarona, con precaución en pacientes que
MANEJO DE LA FIBRILACIÓN AURICULAR/ reciben anticoagulantes.
FLUTTER AURICULAR
Cuando la arritmia ha durado menos de 48
Función cardíaca normal: si la duración de horas se puede intentar cardioversión eléctri-
la FA/Flutter ha sido mayor de 48 horas es ca o amiodarona. En caso contrario, el mane-
necesario evitar la cardioversión por el riesgo jo es similar al de la FA/Flutter de más de 48
aumentado de complicaciones embólicas. Los horas que se hace con cardioversión diferida
antiarritmicos se utilizan con extrema precau- y anticoagulación.
ción. Los medicamentos indicados en este ca-
so son los calcioantagonistas o los β-bloquea-
dores. TAQUIARRITMIAS DE COMPLEJO
ESTRECHO
Se debe practicar ecocardiograma transesofá-
gico para descartar presencia de trombos en TAQUICARDIA DE LA UNIÓN
la aurícula. Si el examen es negativo puede
practicarse cardioversión inmediata. Si el exa- El marcapasos normal se encuentra ubicado
men demuestra trombos, la cardioversión se en el nodo sinusal de la aurícula derecha. Cier-
pospone por tres semanas, tiempo en el cual tas patologías inducen un mayor automatis-
el paciente debe recibir terapia anticoagulante mo en el nodo auriculoventricular, el cual toma
apropiada. Después de convertir a ritmo sinu- entonces el papel de marcapaso.
sal, el anticoagulante se mantiene por cuatro
semanas más. Esta arritmia se observa asociada con intoxi-
cación por digital, infarto agudo de miocardio,
Cuando la arritmia tiene menos de 48 horas miocarditis y en el posoperatorio de cirugía
de evolución puede utilizarse cardioversión cardiaca. Los síntomas producidos incluyen
con corriente eléctrica sincronizada. Los fár- síncope, disnea y palpitaciones.
macos utilizados son amiodarona, flecainida,
o propafenona. Estos antiarrtmicos se usan En el electrocardiograma se observa comple-
en forma aislada; no conviene utilizarlos en jo QRS estrecho sin evidencia de ondas P. Es
combinación debido a la potenciación de sus frecuente la disociación auriculoventricular.
propiedades proarrítmicas.
El manejo se hace de acuerdo al algoritmo de
la figura 3.

405
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Figura 3. Algoritmo de manejo para taquicardia supraventricular de complejo estrecho estable.

TSV de complejo estrecho estable

Intentar maniobras diagnóstico terapéuticas


• Masaje vagal
• Adenosina
• No DC
FE preservada • Amiodarona
• β-bloqueador
• Cabloqueador
Taquicardia de la unión

• No DC
• Amiodarona
FE < 40%, ICC

Orden de priorida
FE preservada • Cabloqueador
• β-bloqueador
• Digoxina
• DC
TSVP
Orden de prioridad
FE < 40%, ICC • No DC
• Digoxina
• Amiodarona
• Diltiazem

Orden de prioridad
FE preservada • No DC
• Cabloqueador
• β-bloqueador
Taquicardia auricular • Amiodarona
multifocalo ectópica
• No DC
• Amiodarona
FE < 40%, ICC • Diltiazem

DC = Cardioversión con corriente eléctrica continua.


FE = Fracción de eyección.
TSV = Taquicardia supraventricular paroxística.
ICC = Insuficiencia cardiaca congestiva.

406
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

TAQUICARDIA SUPRAVENTRICULAR digital y con alteraciones hidroelectrolíticas


como la hipocalemia. En el electrocardio-
La taquicardia supraventricular tiene dos formas: grama la frecuencia auricular es de 150-
220 latidos por minuto con ondas P de mor-
1. Taquicardia supraventricular de complejo fología y duración diferentes a la onda P
ancho. sinusal normal. En pacientes que no estén
2. Taquicardia supraventricular de complejo en tratamiento con digital pueden utilizarse
estrecho. β-bloqueadores y calcioantagonistas para
reducir la frecuencia ventricular. Si el pa-
Taquicardia supraventricular de complejo ciente recibe digital es necesario sospechar
ancho: es muy difícil de distinguir de la taqui- que esta sea la causa de la arritmia.
cardia ventricular. Algunas claves para distin-
guir estas dos taquiarritmias son los datos de
la historia clínica. En un paciente con antece- TAQUICARDIA AURICULAR MULTIFOCAL
dente de enfermedad isquémica del corazón,
es mucho mayor la probabilidad de que el ori- Se asocia con enfermedades pulmonares cró-
gen de la taquiarritmia sea ventricular. nicas, hipocalemia, medicamentos adrenérgi-
cos y con la administración de teofilina. En el
Taquicardia supraventricular de complejo electrocardiograma se identifican ondas P de
estrecho: este tipo de arritmia puede dividir- diferentes morfologías con intervalo PR varia-
se en dos variantes: ble. Para el diagnóstico es necesario que apa-
rezcan en forma consecutiva tres o más de
• Taquicardia supraventricular de reen- estas ondas a una frecuencia mayor de 100
trada: corresponde a la mayoría de los pa- latidos por minuto.
cientes con taquicardia supraventricular.
Puede aparecer en individuos con corazo- El tratamiento depende del compromiso de la
nes normales y también en aquellos con función ventricular como se puede apreciar en
infarto del miocardio, pericarditis o en algu- el algoritmo de la figura 3.
no de los síndromes de reentrada (Síndro-
me de Wolff-Parkinson-White). En el elec-
trocardiograma se observan ondas P de TAQUIARRITMIAS
conducción retrógrada ubicadas sobre el VENTRICULARES
complejo QRS o en el segmento ST. El tra-
tamiento en pacientes inestables es la car- La taquicardia ventricular puede dividirse de
dioversión eléctrica con una dosis inicial de acuerdo a su duración en taquicardia ventricu-
50 J. Los pacientes estables se benefician lar sostenida y taquicardia ventricular no sos-
de la utilización de maniobras vagales co- tenida. El lapso de tiempo que discrimina en-
mo el masaje del seno carotídeo. Si estas tre las dos es 30 segundos. De igual forma se
maniobras son ineficaces pueden usarse considera que la taquicardia ventricular que
medicamentos como la adenosina, el diltia- produce inestabilidad hemodinámica o sínco-
zem o los β-bloqueadores. pe es sostenida a pesar que la duración sea
• Taquicardia supraventricular ectópica: menor de 30 segundos.
es la presencia de tres o más impulsos ori-
ginados en sitios diferentes del nodo sinu- La causa es generalmente una enfermedad
sal. Esta asociada con la intoxicación por estructural grave del corazón, de forma usual

407
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

la cardiopatía isquémica crónica. También 1. Disociación auriculoventricular.


puede aparecer en asociación con otro tipo 2. Duración del complejo QRS mayor a 0,14 s.
de cardiopatías, en alteraciones metabólicas 3. Desviación del eje del QRS a la izquierda
o en intoxicaciones medicamentosas. en caso de bloqueo de rama izquierda.
4. Concordancia de la morfología del comple-
En el electrocardiograma la frecuencia ventri- jo QRS en las derivaciones precordiales del
cular es mayor de 100 latidos/minuto con com- electrocardiograma.
plejos QRS anchos (duración del QRS mayor
a 0,12 ms). La taquicardia ventricular es mono- Una forma especial de taquicardia ventricular
morfica cuando la morfología de los comple- polimorfica es la “torsade de pointes” (torsión
jos QRS es similar y polimorfica en caso con- de puntas). Los complejos QRS varían en am-
trario. plitud y duración. Por definición se asocia con
un intervalo QT prolongado. Puede ser el re-
Es muy importante diferenciar entre la taqui- sultado de varias anormalidades electrolíticas
cardia ventricular y la taquicardia supraventri- como hipocalemia e hipomagnesemia y de la
cular con complejo QRS ancho, debido a que administración de medicamentos como
el tratamiento es diferente. El indicador más fenotiazinas, antidepresivos triciclitos y
confiable es el antecedente de enfermedad quinidina.
cardiaca que orienta hacía el origen ventricular
de la arritmia. Los datos electrocardiográficos El tratamiento de la taquicardia ventricular
asociados con taquicardia ventricular son los estable se observa en la siguiente figura:
siguientes:

Figura 4. Manejo de la taquicardia ventricular estable

FE= Fracción de eyección, Taquicardia ventricular

408
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

TABLA 1. MEDICAMENTOS ANTIARRÍTMICOS

Agente Dosis
Tipo IA
Quinidina 600-1600 mg qd PO
Procainamida 2000-4000 mg qd PO
Disopiramida 150-450 mg q 12h
Tipo IB
Lidocaína 1,5 mg/kg bolo IV luego 1-4 mg/min
Mexiletina 150-300 mg q8h
Tipo IC
Flecainida 50-200 mg q12h PO
Propafenona 150-300 mg q8h PO
Tipo II
â-bloqueador Según el medicamento
Tipo III
Amiodarona 200-600 mg qd PO
Sotalol 80-240 mg q12 h PO
Tipo IV
Diltiazem 240-360 mg qd PO
Verapamilo 240-480 mg qd PO
Otros
Digoxina 0, 125-0,325 mg qd PO

Tomado de Saunders WE, Vance D. Tachycardias. En: Conn´s Current Therapy 2003. Editado por RE Rakel, ET Bopel. Saunders.
Philadelphia, 2003

BRADIARRITMIAS
ETIOLOGIA Causas de Bradiarritmias Incidencia (%)
Primarias 15
Tanto las influencias autónomicas como la pa- Secundarias 85
tología extrínseca del sistema de conducción Isquemia coronaria aguda 40
pueden provocar bradicardia. En particular el Tóxicos farmacológicos 20
infarto del miocardio (IM) con lesión isquémica Metabólicas 5
del sistema de conducción cardiaco, podría Neurológicas 5
originar desde una bradicardia sinusal hasta Falla en el marcapaso
un bloqueo cardíaco completo de tercer grado. permanente 2
Brady et al (1998) identificaron las siguientes Otras 13
causas de bradiarritmias:

409
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CLASIFICACIÓN DE LAS BRADIARRITMIAS o por el uso de bloqueadores β-adrenérgicos.


También pueden ser congénitos.
Bradicardia: se define como bradicardia una
frecuencia cardiaca menor de 60 latidos por Bloqueo AV de segundo grado: presenta
minuto; la onda P es de morfología y duración dos modalidades, en las cuales el impulso del
normal asociada con complejo QRS de carac- nodo sinusal es trasmitido a los ventrículos
terísticas normales. por dos vías diferentes.

Solamente las bradicardias sintomáticas de- Mobitz I o períodos de Wenckebach-


ben ser tratadas. Lucciani: se registra un patrón de bloqueo en
o por encima del nodo AV. La onda P es de
Bloqueo aurículo-ventricular: el nodo morfología normal y se identifica en el ECG
aurículo-ventricular (AV) es la parte del siste- un alargamiento progresivo del intervalo PR,
ma de conducción cardiaca que permite la reconociéndose en el primer complejo de la
trasmisión de los impulsos eléctricos del nodo serie un intervalo de duración normal que se
sinusal a través de fascículos intra-atriales. El prolonga en forma gradual hasta ya no ser
nodo AV se compone de tres partes: atriono- trasmitido. Posteriormente el ciclo vuelve a
dal, nodal y His-nodal. Se ha demostrado que iniciarse. Un episodio de Mobitz tipo I, consis-
la parte nodal es responsable del retardo fisio- te por lo general en un conjunto de 3-5 latidos,
lógico que sufre el impulso a este nivel, lo que con una relación de falla de conducción 4:3,
reduce en forma protectora un eventual exce- 3:2.
so patológico de estímulos de aurícula a ven-
trículo. En situaciones patológicas en el nódulo En el ECG los hallazgos son:
AV se presenta un retardo mayor, lo que pue- 1. Alargamiento progresivo del intervalo PR,
de en casos extremos bloquear el paso del hasta que el último impulso no es transmi-
estímulo sinusal hacia el tronco del Haz de tido.
His y los ventrículos. Esto se refleja en el in- 2. Reducción sucesiva del intervalo RR.
tervalo PR, que mide el comienzo de despola- 3. Latidos agrupados.
rización auricular hasta el comienzo de la
despolarización ventricular. Mobitz tipo II: la etiología, en la mayoría de
los casos, es por oclusión de las ramas proxi-
Se reconocen tres grados de bloqueo: males de la arteria coronaria derecha. Las on-
das P son de morfología normal, el intervalo
Bloqueo AV de primer grado: se identifica PR es constante y seguido de complejos QRS
cuando en el ECG se presenta un intervalo anchos. Sin embargo, súbitamente una onda
PR con una duración constante superior de P no es conducida por el nodo AV. La magni-
los 0,20 segundos en adultos, o superior de tud del bloqueo es expresada según la rela-
0,16 en niños. La morfología de la onda P es ción de ondas P y complejos QRS.
normal y está siempre precedida por un com-
plejo QRS estrecho, debido a que cada im- Al igual que otros bloqueos infranodales, pue-
pulso del nodo sinusal es conducido a los de progresar a bloqueo de tercer grado en
ventrículos. cualquier momento. De acuerdo con las mani-
festaciones clínicas, se debe preparar al pa-
Los bloqueos de primer grado se presentan ciente para la implantación de un marcapaso
en la fiebre reumática, intoxicación digitálica temporal o transvenoso.

410
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

Bloqueo AV de tercer grado: en el bloqueo DIAGNÓSTICO


AV de tercer grado ningún impulso atrial al-
canza el nodo AV. Las cavidades auriculares El examen físico de rutina, no presenta signos
y ventriculares son controladas por distintos específicos en el bloqueo grado I, a excepción
marcapasos, por lo que funcionan de forma de la disminución de la intensidad del primer
independiente. El marcapaso auricular puede ruido cardíaco (S1). El bloqueo de tercer grado
ser el nodo sinusal o un foco ectópico, por lo se asocia con bradicardia profunda y si exacer-
cual se puede registrar a este nivel taquicardia, ba la falla cardiaca o la enfermedad isquémica
bradicardia, fibrilación o flutter; la frecuencia puede producir síntomas como dolor toráxico,
atrial es mayor que la ventricular. El ritmo ven- disnea, confusión, edema pulmonar.
tricular puede originarse en la parte alta del
septum y en este caso los complejos QRS, En el examen semiológico del cuello se pue-
son estrechos y con una frecuencia de 40-50 den detectar “ondas de cañón” con protrusión
latidos por minuto, mientras que el ritmo ventri- de de la vena yugular al encontrar la aurícula
cular originado de la parte baja de los ventrí- derecha cerrada la válvula tricúspide.
culos, se caracteriza por presentar de 30-40
latidos por minuto y complejos QRS anchos. Clínicamente hay bradiarritmia sintomática
cuando se cumplen estos criterios:
Los bloqueos de segundo o tercer grado se
pueden presentar en cardiopatía isquémica, 1. Frecuencia cardiaca lenta.
o infarto del miocardio. 2. El paciente presenta síntomas.
3. Los síntomas se deben a la bradicardia.

FRECUENCIA Síntomas: dolor torácico, disnea, depresión


del sensorio, debilidad, fatiga, intolerancia al
No se registran preferencias por raza, pero ejercicio, aturdimiento, mareos y pérdida de
se observa aumento de bloqueos de tercer conocimiento (síncope).
grado en el sexo femenino, con mayor frecuen-
cia en ancianos, especialmente en aquellos Signos: hipotensión sostenida, hipotensión
con enfermedad cardiaca. ortostática, diaforesis, insuficiencia cardiaca
congestiva, angina inestable, extrasístoles.
El bloqueo de segundo grado tipo Mobitz I, se
presenta en 1-2% de adultos sanos durante Los exámenes de laboratorio no están indica-
el sueño, mientras que el bloqueo tipo Mobitz dos en forma rutinaria. En el caso bloqueo de
II es una patología menos frecuente, pero pue- segundo o tercer grado es conveniente solici-
de tener implicaciones clínicas más graves. tar nivel de electrolitos séricos.

Aproximadamente 5% de los pacientes con La realización de imágenes no es de ayuda.


enfermedad cardiaca tienen bloqueo AV de El ECG es el examen ideal para el diagnóstico.
primer grado y 2% Bloqueo AV de segundo Una prueba de Holter de 24 horas puede iden-
grado. La incidencia de bloqueo de tercer gra- tificar episodios transitorios de bradiarritmias.
do es de 5-10% en mayores de 70 años.

411
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO zón de 0,01 mg/kg por vía IV. Su uso está con-
traindicado en pacientes con tirotoxicosis,
Tratar las bradiacardia sintomáticas es la glaucoma de ángulo cerrado.
recomendación, por lo cual deben reconocer-
se los signos de alarma en el monitor. La respuesta a la administración de atropina
depende de la sensibilidad propia del tejido y
La secuencia de tratamiento para la bradiarrit- de factores como el grado de perfusión tisular
mia sintomática es (American Heart Associa- y de las drogas administradas en forma simul-
tion – Apoyo Vital Cardiovascular Avanzado): tánea, debido a que con otros anticolinérgicos
se producen efectos aditivos. El atenolol y la
1. Atropina. digoxina incrementan sus efectos con la
2. Marcapaso transcutáneo. atropina.
3. Dopamina.
4. Epinefrina. Los efectos secundarios de la atropina inclu-
5. Isoproterenol (con extrema precaución, yen:
cuando no hay respuesta a las primeras
cuatro medidas). 1. Acentuación de enfermedad isquémica
cardiaca.
No obstante, si la causa del trastorno de con- 2. Taquicardia o fibrilación ventricular duran-
ducción es un infarto agudo del miocardio, se te el infarto agudo de miocardio.
debe tratar en primer lugar esta patología. 3. Efectos anticolinérgicos como retención
urinaria, cambios en el estado mental tem-
porales.
ATROPINA

La meta es mejorar la conducción del nodo MARCAPASOS TRANSCÚTANEO (MTC)


AV, reduciendo el tono vagal. Es el agente de
elección para una intervención inicial. No está Es un procedimiento temporal, de intervención
indicada en bloqueos cardiacos de tercer gra- Clase I para toda bradicardia sintomática, por
do, ritmo de escape infranodal o bloqueos Mo- lo que, ante esta situación, debe utilizarse
bitz II, porque puede acelerar la frecuencia mientras se logra el acceso venoso o el efecto
auricular y provocar mayor bloqueo. Debe ser de la atropina. Usualmente se necesita el uso
utilizada con prudencia ante la sospecha de de marcapaso temporal o permanente en Mo-
infarto agudo de miocardio, presto que puede bitz II o bloqueo de tercer grado.
exacerbar la isquemia o inducir TV o FV. La
dosis en adultos para bradicardia sintomática El uso del MTC es un procedimiento rápido,
va de 0,5-1 mg IV en bolo cada 3-5 minutos, minimamente invasor y altamente efectivo en
las veces que sea necesario, con una dosis el tratamiento de bradiarritmias sintomáticas
máxima de 0,03 mg/kg (dosis máxima de 2 o asistolia, que se practica a la cabecera del
mg para un individuo de 70 kg). En cuadros paciente; actualmente muchos desfibriladores/
clínicos urgentes como asistolia o actividad monitores contienen una función modulo
eléctrica sin pulso, se administra 1 mg IV cada MTC.
3-5 minutos, con una dosis máxima de 0,04
mg/kg. En pediatría la dosis se calcula a ra- Un marcapaso permanente esta indicado en:

412
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

Clase I: α1 origina un incremento en la actividad


1. Bloqueo de tercer grado sintomático. cardiaca, que aumenta el inotropismo y crono-
2. Asistolia con una duración mayor o igual a tropismo. La estimulación α2 causa bronco-
tres segundos o ritmo de escape con una dilatación. Debe ser administrado en infusión
frecuencia menor de 40 latidos por minuto a razón de 2-10 µ/min.
en pacientes asintomático.
3. Mobitz II sintomático. Su uso debe hacerse con extrema precaución
4. Taquicardia atrial con síntomas de bloqueo y esta contraindicado en paro cardiaco, con
AV. hipersensibilidad documentada, taquiarrit-
mias, taquicardia, bloqueos causados por in-
Clase II: toxicación digitálica. Es útil solamente en bra-
1. Bloqueo de tercer grado asintomático, con dicardias graves.
ritmo ventricular de escape mayor de 40
latidos por minutos.
2. Mobitz II asintomático.
EVOLUCIÓN
DOPAMINA
Los pacientes que se presentan con bradicar-
Es una catecolamina con efecto α-adrenérgico dia y adecuada perfusión tisular deben ser
y α1-adrenérgico, por lo que aumenta la con- observados con monitoreo electrocardiográ-
tractilidad cardiaca, el volumen minuto y la pre- fico. Pacientes con bloqueo AV de primer gra-
sión arterial. La dopamina se inicia una vez do son por lo general asintomáticos, con rela-
alcanzada la dosis máxima de atropina (0,04 tivo bajo riesgo de progresión del trastorno;
mg/kg), a manera de infusión a una dosis de sin embargo, es necesaria la monitorización
5 µ/kg/min, aumentando la misma hasta 20 µ/ cercana ante la posibilidad de que aparezca
kg/min, si la bradicardia se asocia a compromiso hemodinámico.
hipotensión.
Los bloqueos AV de segundo grado tipo I re-
EPINEFRINA quieren monitoreo continuo para detectar
aquellos en que progresa el bloqueo o se con-
Catecolamina que se utiliza en pacientes con vierten en sintomáticos. Cuando este trastorno
bradicardia grave e hipotensión. Cuando las se presenta con hipoperfusión se debe admi-
dosis altas de dopamina son inefectivas, es nistrar atropina.
el fármaco de elección en asistolia o actividad
eléctrica sin pulso. Se administra en infusión Un bloqueo tipo Mobitz II puede progresar a
que preparada a una concentración de 2 µ/ bloqueo tipo III rápidamente; si ello ocurre. se
mL (1 ampolla de 1 mg epinefrina en 500 mL debe colocar un marcapaso.
de solución fisiológica) se administra a razón
de 1-5mL/min. Los bloqueos AV grado III requieren marcapa-
sos permanente. Paciente ancianos con este
ISOPROTERENOL bloqueo, podrían manifestarse con astenia o
disnea. Pacientes con marcapaso permanen-
Es un fármaco con potente actividad α-adré- te requieren un monitoreo/seguimiento conti-
nergica no selectiva (α1 y α2). La estimulación nuo que evalúe la función del mismo.

413
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COMPLICACIONES 2. Progresión de la isquemia miocárdica, fa-


lla cardiaca, o deterioro de la enfermedad
1. Episodios de sincope con posibles renal.
traumatismos. 3. Muerte súbita mediada por asistolia o
arritmias ventriculares.

Figura 5. Algoritmo para manejo de las bradiarritmias

1
BRADICARDIAS

Examen ABCD Primario


2 • Evalúe ABC
• Asegure vía aérea de manera no
invasiva
• Asegúrese de contar con un monitor/
desfibrilador

Examen ABCD Secundario


• Evalúe ABC secundarios (se requiere
manejo invasivo de la vía aérea?)
• Oxígeno/acceso venoso/monitor/
líquidos
• Signos vitales, oxímetro de pulso, moni-
tor de PA
• Obtenga y revise el ECG de 12 deriva-
ciones
• Obtenga y evalúe una Rx de Tórax,
practicada con equipo portátil
• Anamnesis orientada al problema
• Examen físico orientado al problema
• Diagnósticos diferenciales

Signos o síntomas graves?


3 Secundarios o bradicardia?

No Sí

5 Bloqueo Av de segundo grado Secuencia de intervención


tipo II? Atropina: 0,5-1 mg/kg dosis
MTC: si se cuenta con uno
Bloqueo Av de tercer Grado?
4 Dopamina: 5-20 µg/kg/min
Epinefrina: 2-10 µg/min
Isoproterenol: 2-10 µg/min


Observe

• Prepárese para implantar un Marcapaso transverso.


• Si aparecen síntomas, utilice un MTC, hasta implan-
tar el Marcapaso transvenoso.

414
CAPÍTULO IV: ARRITMIAS

LECTURAS RECOMENDADAS death in Thailand (DEBUT): a randomized clinical


trial. Circulation 2003; 107:2221-6.
1. American Heart Association. Guidelines 2000 for 6. Raitt MH, Klein RC, Wyse DG, et al. Comparison
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with ventricular fibrillation versus ventricular tachy-
care cardiovascular. 2000; 102 (suppl):I-1-I-382.
cardia in the Antiarrhythmics Versus Implantable
2. Brady W, Harrigan R. Evaluation and management
Defibrillators (AVID) trial. Am J Cardiol 2003;
of bradyarrhymias in the emergency departament.
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Emer Med Clin North Am 1998; 16:361-388. 7. Saunders WE, Vance D. Tachycardias. En: Conn´s
3. Ellison KE, Hafley GE, Hickey K, et al. Effect of Current Therapy 2003. Editado por RE Rakel, ET
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ter UnSustained Tachycardia Trial (MUSTT). 8. Wik L, Hansen TB, Fylling F, et al. Delaying defi-
Circulation 2002; 106:2694-9. brillation to give basic cardiopulmonary resuscita-
4. Friedman PA, Dijkman B, Warman EN, et al. Atrial tion to patients with out-of-hospital ventricular fibri-
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llator patients. Circulation 2001; 104:1023-8. 1389-95.
5. Nademanee K, Veerakul G, Mower M, et al. Defi- 9. Zareba W, Fisher S. Atrioventricular Block.
brillator versus beta-blockers for unexplained www.emedicien.com.

415
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Cor pulmonale

Carlos Elí Martínez, MD


Jefe Unidad de Cuidado Intensivo Médico
Fundación Santa Fé de Bogotá

DEFINICIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA

D iferentes definiciones del cor pulmonale


han sido propuestas en las últimas déca-
das. La más conocida es la definición que sos-
con hipertrofia o dilatación, y cuya consecuen-
cia puede ser la falla del ventrículo derecho”.

tiene que este nombre debe aplicarse al “es- Para la definición de la enfermedad según la
tado de hipertrofia del ventrículo derecho origi- presión media en la arteria pulmonar, el valor
nado por diferentes enfermedades que alteran es >15 mmHg en los menores de 50 años; y
la función o estructura de los pulmones”, pero aunque se eleva con la edad, no debe superar
también ha sido la más criticada por conside- los 20 mmHg. Por encima de este valor se con-
rarse basada en descripciones patológicas. A sidera que hay hipertensión pulmonar, y si hay
pesar de estas críticas, la definición sigue sien- documentación o sospecha de enfermedad pul-
do muy útil como una guía para orientar la in- monar asociada como su causa, puede diag-
terpretación de los métodos de diagnóstico nosticarse cor pulmonale. La presencia de en-
más recientes, especialmente el ecocardio- fermedad pulmonar coexistente es, entonces,
grama. factor indispensable para el diagnóstico, pues
la hipertensión pulmonar (HTP) es un rasgo
Otra propuesta sugiere que el término hiper- compartido por otros grupos de enfermedades,
trofia de la definición anterior sea reemplaza- por lo cual la clasificación de la HTP en cinco
do por “alteración estructural y funcional del grupos por la Organización Mundial de la Sa-
ventrículo derecho”, con lo cual se pone de lud (Tabla 1) ha buscado aclarar este punto.
manifiesto que las consecuencias son dinámi- Estos cinco grupos incluyen la hipertensión
cas y no solamente anatómicas. pulmonar venosa (debida con mayor frecuencia
a la enfermedad cardiaca izquierda), la HTP
El conocimiento fisiopatológico actual ha cen- primaria y la causada por enfermedad coláge-
trado el interés en el papel preponderante de no-vascular, la debida a enfermedad trombo-
la alteración de los vasos pulmonares en la embólica recurrente, la ocasionada por enfer-
génesis y consecuencias del cor pulmonale, medad inflamatoria del sistema vascular pul-
por lo cual se ha propuesto que una definición monar (como en la esquistosomiasis) y la origi-
coherente con ello debe ser la de considerar nada en las enfermedades respiratorias que
al cor pulmonale como “una forma de hiperten- cursan con hipoxemia o hipoventilación alveo-
sión arterial pulmonar debida a enfermedades lar. Es a este subgrupo al que se aplica con ma-
que afectan la estructura o función del pulmón yor frecuencia el término cor pulmonale y para
y que lleva a crecimiento ventricular derecho, el cual hay mayor claridad en su tratamiento.

416
CAPÍTULO V: COR PULMONALE

Sin embargo, los principios generales de tera- conoce que es causa de 100.000 muertes por
pia son aplicables al cor pulmonale ocasiona- año en los Estados Unidos, es la sexta causa
do por otras causas además de las citadas, de muerte en el mundo, con 2.211.000 vícti-
especialmente las enfermedades colágeno- mas y llegará a ser la tercera en el año 2020.
vasculares. Una definición adicional, de mayor En Colombia es la sexta causa de mortalidad
importancia, es la de la “descompensación” y la sexta causa como diagnóstico de egreso
del cor pulmonale, que se acepta correspon- hospitalario.
de a la aparición de la falla ventricular derecha
clínica, con signos de aumento de la presión A pesar de las amplias variaciones existentes
venosa sistémica dados por la aparición de en la práctica clínica, usualmente se acepta
edemas periféricos e ingurgitación venosa. que la hospitalización del paciente con EPOC
Esta suele ser la razón por la que los pacien- y la muerte ocurren por complicaciones en es-
tes acuden a los servicios de urgencias. tado avanzado de la enfermedad, en el cual
la hipertensión pulmonar asociada que define
La frecuencia del cor pulmonale es, en gran el cor pulmonale suele estar presente, pues
medida, desconocida, pero sí hay datos más la edad avanzada, la hipoxemia y la hipercap-
precisos acerca de las enfermedades que la nia (todas ellas relacionadas con el desarrollo
desencadenan. Por ejemplo, para la enferme- de hipertensión pulmonar en la EPOC) son
dad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) se factores que aumentan el riesgo de mortali

TABLA 1. CLASIFICACIÓN DE LA HIPERTENSIÓN PULMONAR

1. Hipertensión arterial pulmonar


1.1 Primaria (Esporádica o familiar)
1.2 Relacionada con enfermedad del colágeno, medicamentos o VIH
2. Hipertensión venosa pulmonar
2.1 Por enfermedad ventricular izquierda
2.2 Por enfermedad valvular izquierda
2.3 Por obstrucción venosa
2.4 Enfermedad veno-oclusiva pulmonar

3. Asociada a enfermedad respiratoria o hipoxemia


3.1 Enfermedad pulmonar obstructiva crónica
3.2 Enfermedad pulmonar intersticial o infiltrativa difusa
3.3 Trastornos respiratorios del sueño
3.4 Hipoventilación alveolar
3.5 Enfermedad crónica de las alturas
3.6 Otros
4. Enfermedad tromboembólica
4.1 Proximal o central
4.2 Obstrucción distal (tromboembólica, cuerpo extraño, tumoral o parasitaria
5. Enfermedad directa de los vasos pulmonares
5.1 Inflamatoria (sarcoidosis, esquistosomiasis)
5.2 Hemangiomatosis

417
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dad. En general, el grado de hipertensión pul- y óxido nítrico local, según estudios en mode-
monar debida a las enfermedades pulmonares los animales.
suele ser moderado y su magnitud guarda re-
lación con la severidad y curso de la enferme- Un factor de importancia en el desarrollo del
dad pulmonar, especialmente de la hipoxemia cor pulmonale es la disminución en el área
resultante, que parece ser uno de los princi- vascular pulmonar, que acompaña a la des-
pales factores en la fisiopatología de esta com- trucción y fibrosis del parénquima en las enfer-
plicación. medades obstructivas e intersticiales. Otros
factores relacionados, aparentemente en me-
nor grado, son la presencia de acidosis respi-
FISIOPATOLOGÍA ratoria debida a la hipercapnia y el aumento
local de la viscosidad sanguínea derivada de
La HTP responsable del desarrollo del cor la poliglobulia que aparece como compensa-
pulmonale se debe, principalmente, a los efec- ción a la hipoxemia.
tos locales de la hipoxemia. Estudios experi-
mentales y estudios epidemiológicos han de- En conjunto, todos estos hechos llevan a au-
mostrado esta relación. mento de la resistencia vascular pulmonar,
para la cual el ventrículo derecho no está bien
Dos mecanismos llevan a los cambios vascu- preparado. El ventrículo derecho, un músculo
lares derivados de la hipoxemia. muy delgado, está adaptado a un sistema de
baja presión y su capacidad de reserva con-
El primero es el de la vasoconstricción hipóxi- tráctil es muy limitada. En respuesta al incre-
ca, que se presenta sobre todo en condicio- mento de la resistencia hay crecimiento ventri-
nes agudas y que ocurre principalmente en cular por una mezcla de los mecanismos de
las pequeñas arteriolas precapilares, como se hipertrofia y dilatación, sin que caiga inicial-
observa durante el ejercicio en pacientes con mente el gasto cardiaco. La disfunción diastó-
EPOC o en los episodios de exacerbación lica y sistólica resultante en el ventrículo de-
aguda de la enfermedad pulmonar. recho puede llevar, con incrementos superio-
res de la presión, a causar desviación hacia
El segundo mecanismo es un evento crónico la izquierda del tabique interventricular (des-
de cambios en la pared vascular conocido co- viación paradójica del septum), situación que
mo “remodelación vascular”, que aparece des- puede asociarse con restricción a la función
de antes de que se mantenga la hipoxemia ventricular izquierda y en ocasiones caída del
en reposo y lleva a fibrosis de la íntima vascu- gasto cardiaco. Este es un evento más tardío
lar, aumento del espesor del músculo locali- y su aparición, que ocurre a la par con la de la
zado en la capa media e incluso musculariza- disfunción ventricular derecha y la manifesta-
ción (aparición anormal e incremento de la ción de los edemas, no es susceptible de pro-
capa muscular) en arteriolas. nóstico en el paciente individual.

El proceso de remodelación sería consecuen- En resumen, la génesis del cor pulmonale es


cia del incremento en el estrés celular por principalmente la hipoxemia por enfermedad
vasoconstricción sostenida que lleva a mayor pulmonar, debido a la vasoconstricción, remo-
expresión de endotelina, angiotensina y fac- delación vascular y disminución del área vas-
tores locales de crecimiento, a la par con inca- cular, y su consecuencia es el incremento de
pacidad local para la síntesis de prostaciclina la carga sobre el ventrículo derecho que puede

418
CAPÍTULO V: COR PULMONALE

llevar a deterioro posterior de las cavidades blemas de sensibilidad y especificidad, a la


izquierdas e hipoperfusión sistémica. Los ede- par con grandes limitaciones técnicas debidas
mas son resultado tanto de la hipoperfusión a la enfermedad pulmonar subyacente. El
renal como del aumento de la presión venosa electrocardiograma tiene baja sensibilidad y
sistémica y su efecto sobre la hemodinamia alta especificidad, la presencia de signos de
intraglomerular. hipertrofia ventricular derecha es de gran ayu-
da diagnóstica, su presencia tiene negativas
implicaciones sobre el pronóstico en los pa-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS cientes con EPOC; pero su ausencia no
descarta la presencia de hipertensión
El cor pulmonale es consecuencia de otra pulmonar y sus consecuencias sobre el
enfermedad, pulmonar usualmente, por lo que ventrículo derecho.
el cuadro clínico suele estar dominado por los
signos y síntomas de la enfermedad subya- En la radiografía del tórax deben buscarse sig-
cente, en la mayoría de casos de la EPOC, la nos compatibles con la enfermedad pulmonar
enfermedad intersticial, el síndrome de hipo- subyacente; los signos de hipertensión pulmo-
ventilación en la obesidad o las restricciones nar, especialmente el aumento del diámetro
por anormalidad adquirida o congénita de la de las arterias pulmonares centrales, en par-
caja torácica. En cualquiera de estos pacientes ticular la arteria interlobar derecha, y el creci-
que se presentan a urgencias se deben buscar miento del ventrículo derecho, son tardíos en
de manera activa los signos clínicos de creci- el desarrollo de la enfermedad.
miento y sobrecarga del ventrículo derecho.
Entre ellos están la búsqueda del latido para- El ecocardiograma ha adquirido gran impor-
esternal y del impulso epigástrico, la auscul- tancia en la confirmación del diagnóstico y en
tación de un soplo de regurgitación tricuspídea el diagnóstico diferencial. El método permite
y el incremento del componente pulmonar del la determinación del tamaño de la cavidad y
segundo ruido. el espesor de las paredes ventriculares, el cál-
culo de la presión media en la arteria pulmo-
Otros signos corresponden a las manifesta- nar, la descripción de la posición y movimien-
ciones más avanzadas de la hipoxemia seve- to del tabique interventricular y la demostra-
ra, como cianosis, hipocratismo digital, irrita- ción de ausencia de cortocircuitos intracardia-
bilidad y, en casos de hipercapnia severa, al- cos y enfermedad pericárdica.
teración del estado mental y alteraciones en
los reflejos pupilares que señalan la presen- La principal limitación para su uso es su dispo-
cia de edema cerebral por retención de dióxido nibilidad; y en ocasiones la falta de una ven-
de carbono. Los edemas periféricos y la ingur- tana acústica adecuada, debido a la hiperinsu-
gitación venosa sistémica (distensión de las flación o atrapamiento de aire. Casi siempre
yugulares y hepatomegalia a veces pulsátil) el hallazgo es un incremento moderado en la
son necesarios para definir el cor pulmonale. presión pulmonar, de manera que si el valor
no es muy alto, lo mismo que si la radiografía
es muy cercana a lo normal, deberán buscar-
AYUDAS DIAGNÓSTICAS se otras causas de hipertensión pulmonar,
especialmente las de origen tromboembólico
Los estudios auxiliares para la detección y cla- o la variedad primaria.
sificación del cor pulmonale tienen serios pro-

419
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El cateterismo cardiaco derecho mide direc- generado por el cor pulmonale mismo. El uso
tamente las presiones pulmonares y el gasto de digital sigue siendo ampliamente discutido,
cardiaco, pudiendo calcularse la resistencia pero se acepta cuando se ha comprobado la
vascular pulmonar, por lo que sigue conside- coexistencia de falla ventricular izquierda.
rándose el estándar de referencia para el diag-
nóstico; sin embargo, no está justificado, ex- Tanto el tratamiento diurético como el uso de
cepto si hay duda, en especial para el diag- la digital deben vigilarse en forma estrecha,
nóstico diferencial con cortocircuitos ocultos por la posibilidad de desarrollar alcalosis meta-
o con hipertensión pulmonar primaria y tam- bólica, en el caso de los diuréticos, y la mayor
bién cuando se considera el tratamiento con probabilidad de toxicidad digitálica con el uso
sustancias vasodilatadoras potentes. Por la de este inotrópico.
posibilidad de encontrarse con valores eleva-
dos de presión en el circuito pulmonar, que Finalmente, para el manejo de la hipertensión
limitan la probabilidad de éxito en el posicio- pulmonar existen dos estrategias: el uso de
namiento del catéter de flotación, este proce- oxigenoterapia y los vasodilatadores pulmo-
dimiento no se recomienda al lado de la cama nares.
del paciente ni en sala de urgencias, sino de
manera formal en la sala de hemodinamia. La oxigenoterapia se considera indicada en
todos los pacientes que ya están en una fase
de su enfermedad pulmonar que los llevó a
TRATAMIENTO cor pulmonale. Los resultados positivos so-
bre la mortalidad en la EPOC con la oxigenote-
Tres componentes principales de la terapia del rapia a largo plazo en casa, usando flujos ba-
cor pulmonale deben separarse: jos por lo menos por 15 horas al día, confirman
el papel de la hipoxia alveolar sobre el desa-
• Manejo de la enfermedad subyacente rrollo y progresión de esta complicación. En
(causa). el manejo agudo debe suministrarse oxígeno
• Manejo de la falla ventricular (consecuen- en forma inmediata, con vigilancia inicial de
cia). los gases sanguíneos y seguimiento con oxi-
• Manejo de la hipertensión pulmonar mis- metría de pulso, buscando como objetivo una
ma (mecanismo mediador o intermedio de saturación cercana a 90%, vigilando la apari-
la lesión). ción de hipoventilación como complicación de
la enfermedad (por fatiga ventilatoria) o del
El manejo inicial es el de la enfermedad sub- tratamiento (por la supuesta pérdida del estí-
yacente que llevó al cor pulmonale y el de la mulo hipoxémico para la respiración). En el
causa de su descompensación. El tratamien- servicio de urgencias debe considerarse tam-
to de la falla ventricular incluye el uso de diu- bién la instauración de soporte ventilatorio no
réticos, que en pacientes con edema severo invasor en los pacientes con acidosis respira-
deben ser administrados por vía intravenosa, toria no compensada.
siendo de elección la furosemida, pues existe
la posibilidad de edema de la mucosa intesti- La oxigenoterapia, tanto en forma aguda como
nal. En el manejo crónico debe preferirse los crónica, suele ser tratamiento suficiente para
diuréticos tiazídicos o la espironolactona en la hipertensión pulmonar, de manera que el
dosis bajas, ésta última para manejo del es- manejo activo con vasodilatadores en el cor
tado de hiperaldosteronismo que puede ser pulmonale no suele ser necesario, excepto en

420
CAPÍTULO V: COR PULMONALE

forma aguda, en casos de severa restricción por todas las enfermedades antes señaladas,
ventricular izquierda como consecuencia del el paciente ha tenido un curso crónico de su
desplazamiento del tabique interventricular enfermedad pulmonar y la instalación de los
(indicativo de severa hipertensión pulmonar) edemas y el deterioro han ocurrido en forma
o en estado de bajo gasto por la hipertensión progresiva. La disfunción ventricular derecha
pulmonar en el paciente en falla respiratoria. aguda sin claros signos de enfermedad pulmo-
En el manejo crónico no hay indicaciones nar, con radiografía de tórax normal o con
aceptadas, siendo los estudios limitados; se mínimas alteraciones y severa hipoxemia y
ha extrapolado mucha información derivada bajo gasto cardiaco es la manifestación cardio-
del estudio de la hipertensión pulmonar prima- vascular del embolismo pulmonar severo. En
ria, en la cual tampoco son suficientes las este caso los fenómenos fisiopatológicos sub-
pruebas realizadas. yacentes derivan del desarrollo agudo de
hipertensión pulmonar por oclusión vascular,
Si se opta por el vasodilatador, debe conside- con disminución del área transversa del lecho
rarse su inicio bajo condiciones controladas, pulmonar y liberación de sustancias vasoacti-
con cateterismo del corazón derecho y medi- vas por el émbolo, con hipoxemia resultante
ción directa de presiones, pues la hipotensión del bajo gasto (ya no su consecuencia).
sistémica y el bajo gasto pueden acentuarse
como consecuencia de falta de selectividad La elevación aguda de la resistencia vascular
de los vasodilatadores por el lecho pulmonar pulmonar no permite los cambios de adapta-
y su persistencia de efecto en el lecho arterial ción del ventrículo derecho, que se ve sujeto
sistémico. En la fase aguda puede ser de uti- a dilatación aguda e incremento de la tensión
lidad el óxido nítrico inhalado (su vida media en su pared y aumento del consumo de oxí-
corta limita los efectos sobre la vasculatura geno. Como resultado de la dilatación severa
sistémica) en una concentración inferior a 40 aguda, se compromete el llenado ventricular
ppm. Para el manejo crónico se han probado izquierdo y hay caída del gasto cardíaco que
los calcioantagonistas, en especial nifedipina, puede llevar al shock circulatorio y caída de
con pobres resultados y su potencial para exa- la presión de perfusión de las arterias
cerbar la falla cardiaca izquierda coexistente. coronarias.
El efecto del vasodilatador usado en forma
crónica debe evaluarse con pruebas funcio- A semejanza del cor pulmonale crónico agudi-
nales como la capacidad de ejercicio, grado zado, en este síndrome también el tratamien-
de diseño y la calidad de vida. También debe to de primera elección es la oxigenoterapia,
considerarse la realización de cateterismo sin limitación del flujo necesario para alcan-
cardiaco derecho de control. Nuevas alterna- zar la saturación apropiada. Pero, a diferen-
tivas en estudio incluyen sildenafil y diferen- cia de la contraparte crónica, en el cor pulmo-
tes bloqueadores del receptor de endotelina. nale agudo se debe considerar tempranamen-
te la reposición de líquidos y el uso de vasopre-
sores para alcanzar una presión media arterial
COR PULMONALE AGUDO que garantice una presión de perfusión coro-
naria suficiente para mantener el consumo de
El cor pulmonale agudo es una entidad nosoló- oxígeno miocárdico que está aumentado. Ante
gica diferente del cor pulmonale crónico tanto la falta de respuesta debe considerarse la
estable como descompensado. En general, trombolisis del émbolo pulmonar.

421
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CRITERIOS DE REFERENCIA LECTURAS RECOMENDADAS

El proceso inicial de diagnóstico del paciente 1. Incalzi RA, Fuso L, De Rosa M. Electrocardio-
con cor pulmonale puede y debe hacerse en graphic signs of chronic cor pulmonale, a negative
forma expedita en el servicio de urgencias. prognostic sign in COPD. Circulation 1999;
99:1600-1605.
Debe referirse al especialista apropiado,
2. Maloney JP. Advances in the treatment of
usualmente al de enfermedades pulmonares secondary pulmonary hypertension. Curr Opin
en los casos que requieran hospitalización, en Pulm Med 2003; 9:139-143.
particular para el manejo de la ventilación no 3. McNeil K, Dunning J, Marrell NW. The pulmonary
invasora o la falla ventricular derecha, lo mis- circulation and right ventricular failure in the ITU.
mo que todos los pacientes con falla respira- Thorax 2003; 58:157-162.
toria que requieran intubación por la enferme- 4. Presberg KW, Dincer HE. Pathophysiology of
dad subyacente o todos los que tienen shock pulmonary hypertension due to lung disease. Curr
Opin Pulm Med 2003; 9:131-138.
circulatorio como consecuencia del cor
5. Restrepo S, Solarte I. Cor pulmonale. Rev Colomb
pulmonale crónico. Neumol 1994; 6:198-200.
6. Ruchlin HS, Dasbach EJ. An economic overview
of COPD. Pharmacoeconomics 2001; 19:623-642.
RECOMENDACIONES SOBRE 7. Vaillard-Baron A, Page B, Augarde R. Acute cor
ACTUALIZACIÓN E INVESTIGACIÓN pulmonale in massive pulmonary embolism: inci-
dence, echocardiographic pattern, clinical implica-
Los nuevos desarrollos en el uso de vasodila- tions and recovery rate. Intens Care Med 2001;
27:1481-1486.
tadores, ventilación no invasora y decisiones
8. Weitzemblum. Chronic cor pulmonale. Heart 2003;
de tratamiento trombolítico del embolismo pul- 89:225-230.
monar, campos en los cuales hay intensa in-
vestigación.

No existe investigación nacional sobre este


tema, la cual debe ser fuertemente motivada.

422
CAPÍTULO VI: DESFIBRILACIÓN Y CARDIOVERSIÓN

CAPÍTULO VI

Desfibrilación y cardioversión

Jorge Salcedo, MD
Jefe Departamento de Urgencias
Fundación Santa Fé de Bogotá

Lucas Andrés Salas Díaz, MD


Hospital Centro Oriente
Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l uso de electricidad para el tratamiento


de las arritmias cardiacas es bastante
común hoy en día, y el desfibrilador/cardiover-
en evolución. La respuesta desencadenada
es un latido ventricular ectópico prematuro que
se localiza justo en un área eléctrica vulnera-
tor es un aditamento indispensable para el ma- ble de la contracción (fenómeno de R en T),
nejo de arritmias potencialmente fatales en ur- que dispara una oleada de contracciones mio-
gencias; su uso se ha extendido al nivel cárdicas caóticas que comprometen la vida
prehospitalario. del paciente.

La fibrilación auricular o ventricular es produc- Las Guías 2000 de la Asociación Americana


to de una despolarización y repolarización del Corazón (American Heart Association) enfa-
aleatoria del miocardio, lo que produce activi- tizan la necesidad de la desfibrilación precoz
dad caótica del miocardio, lo cual impide la en todo paciente en FV o TV sin pulso, por en-
contracción coordinada dando un patrón de cima de cualquier otra maniobra de reanima-
bombeo irregular e inefectivo, lo que produce ción. La supervivencia por cada minuto de de-
un gasto cardiaco cercano a cero en el caso mora en desfibrilar a estos pacientes descien-
de la fibrilación ventricular (FV). La ausencia de 7-10% por minuto, con 90% de éxito al su-
de pulso disminuye los niveles de oxígeno has- ministrar la descarga en el primer minuto.
ta un punto crítico en el cual hay daño celular
irreversible, que corresponde al sustrato de Todo el personal de la salud debe conocer el
la muerte cardiaca súbita. manejo de un desfibrilador automático externo
(DEA) y debe ser capaz de emplearlo en una
emergencia tanto intra como extrahospitalaria,
DESFIBRILACIÓN donde éste se encuentre disponible. Asimis-
mo, los médicos de urgencias y aquellos que
El paciente adulto en paro cardiaco general- manejan servicios de pacientes hospitalarios
mente debuta con un ritmo de FV o de taqui- deben poseer conceptos básicos sobre el
cardia ventricular (TV) sin pulso y el sustrato manejo de los desfibriladores/cardiovertores
es un corazón isquémico con un infarto agudo convencionales.

423
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El desfibrilador es un aparato que emite una y esperar el mensaje de ‘descarga indicada’ o


descarga eléctrica no sincronizada (esto es ‘descarga no indicada’.
en cualquier punto eléctrico del ciclo cardiaco)
en un intento por causar una despolarización Cuando el DEA indique una descarga es nece-
completa del miocardio que permita al nodo sario comprobar que nadie haya hecho con-
sinusal, o al nodo predominante del paciente, tacto con el paciente durante el periodo pos-
retomar el comando del ritmo cardiaco, con terior al análisis (movimientos al tocarlo pue-
recuperación del gasto cardiaco. den producir una mala interpretación del rit-
mo), avisar de la descarga y oprimir el botón
descarga o shock. Repetir en tres oportuni-
DESFIBRILADOR EXTERNO AUTOMÁTICO dades todo el proceso o hasta que el análisis
(DEA) indique ‘descarga no indicada’. En ese mo-
mento se comprueba el pulso, y si hay pulso
El uso de los DEA es simple; este aparato se se continúa el algoritmo de la AHA según el
utiliza por personal médico y no médico en compromiso hemodinámico y a los signos de
situaciones intra y extrahospitalarias. El ma- inestabilidad que tenga el paciente, o se colo-
letín consta de una pantalla de mensajes, un ca en posición de recuperación.
botón de encendido/apagado, un botón de
‘análisis’ y un botón de descarga o shock (al- Si el paciente persiste sin pulso, se continúa
gunos modelos completamente realizan el la reanimación por un minuto más y se vuelva
análisis y la descarga automáticamente), un a analizar; se repite el procedimiento cuantas
par de cables, tres pares de electrodos auto- veces sea necesario. Si hay un mensaje ini-
adhesivos, una cuchilla de afeitar y una más- cial de ‘descarga no indicada’ y no hay pulso,
cara de ventilación con válvula de escape. el paciente puede estar en asistolia o activi-
dad eléctrica sin pulso (AESP).
El paciente que se encuentra en paro cardiaco,
sin pulso debe ser rápidamente atendido si- El desfibrilador automático no debe usarse en
guiendo el protocolo ABCD primario de la AHA, menores de ocho años o en pacientes con
donde la D implica desfibrilación precoz (en menos de 25 kg de peso; puede utilizarse en
ritmos NO susceptibles de desfibrilación, la D ambientes húmedos luego de secar el pecho
corresponde a evidenciar ritmo). Se debe prio- del paciente. Debe usarse a una distancia
rizar el uso del desfibrilador automático sobre mínima de 2,5 cm de los marcapasos implan-
el resto de maniobras de reanimación, siempre tados o desfibriladores implantados, y si se
que esté disponible en el evento de un paro desea se pueden deshabilitar estos últimos
cardiaco. con un imán.

El paso inicial es encender el aparato, colo- Si el desfibrilador no puede analizar el ritmo y


car los electrodos autoadhesivos en el tórax aparece un mensaje de ‘verificar electrodos’,
del paciente a nivel paraesternal derecho y a se revisa que estos se adhieran adecuada-
nivel del ápex cardiaco sobre el quinto espa- mente al pecho del paciente, se seca la piel
cio intercostal con línea axilar anterior. Se del tórax, se aplica, si hay vello se deben
deben conectar los cables a los electrodos, arrancar los electrodos y colocar un nuevo par,
suspender inmediatamente las maniobras de y si persiste el problema arrancarlos y rasurar
reanimación, oprimir el botón de análisis (al- el pecho antes de colocar el último par.
gunos modelos lo realizan automáticamente)

424
CAPÍTULO VI: DESFIBRILACIÓN Y CARDIOVERSIÓN

Como precauciones universales nadie debe sivos en hombro derecho (blanco), ápex
tocar al paciente durante el análisis, ni en el cardiaco (rojo) y hombro izquierdo. Algunos
momento de descargar, y no debe usarse en modelos disponen de cinco electrodos que se
vehículos terrestres en movimiento (ambulan- ubican en el epigastrio y en la base torácica
cias); está contraindicado su uso en el pacien- derecha.
te con pulso debido a que el aparato puede
identificar el ritmo como susceptible de desfi- Si se emplean las paletas, debe usarse un gel
brilación y producir una descarga con resulta- conductor especialmente diseñado para tal fin
dos fatales para el paciente. o gasas embebidas en solución hidroelectro-
lítica (SSN o Lactato de Ringer). No se reco-
mienda el uso de alcohol o de cualquier otro
DESFIBRILADORES CONVENCIONALES tipo de gel. Se debe ejercer presión uniforme,
aplicando 12 kg (25 lb), presión que debe de-
Son aparatos más pesados que pueden utili- formar el tórax levemente sin permitir la pre-
zarse en entornos pre y hospitalario; actual- sencia de “puentes” de gel entre los electrodos
mente cuentan con una serie de funciones co- en la piel por el riesgo de quemaduras cutá-
mo cardioversión sincronizada y marcapasos neas y desviación del arco eléctrico. Se debe
trascutáneo; permiten observar y monitorizar seleccionar el nivel de energía con la persona
el ritmo de un paciente y obtener tiras electro- a cargo del monitor (algunos modelos dispo-
cardiográficas de las derivaciones (algunos nen de la selección de energía en la paleta
modelos realizan electrocardiograma de 12 del ápex), oprimir el botón de carga de la pa-
derivaciones). leta derecha y descargar simultáneamente con
los botones de descarga de ambas paletas,
El monitor tiene un botón de encendido/apa- sin soltar la presión entre las descargas su-
gado, un botón de carga, una pantalla visoscó- cesivas de acuerdo al algoritmo de la AHA.
pica, un selector de energía, un botón de sin-
cronización (Sync/Async). Los modelos que La energía de desfibrilación en una onda mo-
disponen de marcapaso cuentan además con nofásica sinusoidal debe ser escalonada 200,
selector para monitoria por derivación o pale- 200-300 y 360 J (Joules, Julios) en el adulto y
tas, ajuste de ganancia y volumen según el 2 J/Kg, 2-4 J/Kg y 4 J/Kg en los niños meno-
modelo. res de ocho años (descargas bifásicas dispo-
nibles en modelos avanzados permiten la en-
El personal de urgencias debe conocer su trega de solamente 100-150 julios de energía
equipo particular, así como la forma en que con igual eficacia y menos efectos adversos).
se utiliza. Hay dos formas de monitorizar el Las tres descargas deben ser sucesivas (has-
paciente: la primera es “rápida” utilizando las ta salir de FV o inducir asistolia) sin soltar la
paletas, las cuales se ubican de la misma ma- presión y sin reanudar la reanimación entre
nera que en los DEA; o puede usarse la varia- las descargas. En descargas posteriores se
ción anteroposterior (paraesternal izquierdo el usa el valor más alto de energía (algoritmos
electrodo del ápex e infraescapular derecho en pediatría avalan el uso de descargas se-
el otro electrodo). La segunda requiere un ma- guidas en grupos de tres).
yor tiempo (30 segundos en promedio) con
los electrodos. Hay tres cables para monitoría Las indicaciones y contraindicaciones son las
como mínimo (blanco, rojo, negro, verde o ca- mismas del DEA, debe avisarse de la descar-
fé) que se ubican con electrodos autoadhe- ga a todo el personal (‘Voy a descargar a las

425
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

tres, uno estoy alejado, dos están alejados, plantea como una alternativa para el manejo
tres todos alejados’, o una frase similar) y de taquicardias estables luego de intentar
nadie debe estar en contacto con el paciente, manejo farmacológico máximo.
en particular quien controla la vía aérea y quien
realiza la descarga. Al estar el paciente con La cardioversión eléctrica frena las vías de
monitoria continua electrocardiográfica no es conducción eléctrica, tanto normales como
necesario revisar el pulso entre las descargas accesorias, lo que permite al nodo sinusal re-
sino hasta obtener un resultado eléctrico en tomar el ritmo normal.
el monitor y, por lo tanto, es fundamental revi-
sar que las derivaciones estén correctamente Durante la cardioversión eléctrica se sincro-
conectadas. Una vez logrado un ritmo esta- niza la descarga con el complejo QRS; espe-
ble se revisa el pulso para definir la estabili- cíficamente se debe lograr que el monitor ten-
zación del paciente. ga una onda R visible y fácilmente reconoci-
ble y que no haya sincronización con ondas P
La desfibrilación sólo es útil en pacientes con o T prominentes. Es necesario ajustar la ga-
FV o TV sin pulso; está contraindicada en pa- nancia o las derivaciones hasta lograr este
cientes con pulso, en asistolia o en AESP debi- objetivo. Con la cardioversión se evita la zona
do a que aumenta la actividad vagal del pacien- eléctrica vulnerable que corresponde a los 30
te. Si hay sospecha de FV de aspecto fino, debe ms previos a la punta de la onda T en los cua-
confirmarse realizando las siguientes acciones: les se puede generar un fenómeno de R en T
y producir una FV secundaria.
1. Aumentar la ganancia del monitor.
2. Rotar las paletas 90°. El paciente en estos casos esta consciente o
3. Cambiar la derivación, revisar los cables. con una alteración leve de la conciencia, por
lo cual requiere ser sedado según el protoco-
El uso de desfibrilación a cielo abierto no es lo de cada servicio de urgencias. En general
tan común en urgencias médicas pero puede se recomienda el uso de un hipnótico sedan-
presentarse en trauma con reanimación car- te (tiopental sódico, benzodiacepinas) con un
diaca directa por toracotomía de urgencia. En analgésico (morfina, fentanil).
estos casos se deben usar las paletas para
desfibrilación directa con energías de 5-40 J Se debe ajustar en modo sincronizado, con lo
en forma escalonada. cual aparecerán unas líneas punteadas
(guías) en el monitor que deben coincidir con
las R del electrocardiograma.
CARDIOVERSIÓN ELÉCTRICA
La energía inicial debe ser de 50 J para el
Es el uso de corriente eléctrica para terminar flutter auricular y la taquicardia supraventicular
taquiarritmias diferentes a la FV O TV sin paroxística (TSVP), de 100 J para las demás
pulso. taquicardias inestables y 200 J para la TV con
pulso polimórfico, para lo cual se usa corrien-
En la actualidad la AHA promulga el uso de la te escalonada en forma similar que en la
cardioversión eléctrica como primera medida desfibrilación.
para el manejo de taquicardias inestables (cri-
terios de inestabilidad: dolor torácico, disnea, La posición y la descarga es igual que en la
shock, signos de bajo gasto cardíaco) y se desfibrilación; sin embargo, al descargar el

426
CAPÍTULO VI: DESFIBRILACIÓN Y CARDIOVERSIÓN

choque puede tardar unos segundos mientras experimentos clínicos con corriente bi-direc-
el aparato coordina la liberación de energía cional en pacientes con marcapasos implan-
con las ondas R y, por lo tanto, se debe man- tados. La onda en este caso no sigue un pa-
tener oprimido el botón de descarga y sostener trón sinusoidal ascendente unidireccional (on-
la presión de las paletas hasta que el car- da monofásica sinusoidal amortiguada o trun-
diovertor entregue la energía. cada), sino que describe un patrón truncado
exponencial compensado, con lo cual la co-
Después de cada choque se debe volver a rriente alcanza un pico de manera lineal y no
sincronizar la descarga, por cuanto los desfi- sinusoidal dando una onda casi cuadrada que
briladores pasan al modo asincrónico automá- luego forma un patrón reverso (bifásico). La
ticamente por el riesgo de FV. administración de energía en este caso es
menor requiriendo sólo 100-170 J sin escalar
Las taquicardias por foco automático (taqui- la dosis. Su uso debe ceñirse a las normas
cardia de la unión, taquicardia auricular multi- técnicas del fabricante y aún no hay una re-
focal) no responden a la cardioversión eléctri- comendación definitiva para su adopción por
ca o tienen una respuesta muy pobre, por lo parte de la AHA como un método mejor o peor
tanto se debe preferir el uso de antiarrítmicos que la onda monofásica tradicional.
en estos casos.

En el evento de TV con pulso inestable, con LECTURAS RECOMENDADAS


demora en la cardioversión por evaluación difí-
cil del complejo QRS por parte de cardiovertor, 1. American Heart Association. Desfibrilación exter-
se debe desfibrilar porque la demora puede na automática. En: AVB para el equipo de salud.
Waverly Hispánica SA. Buenos Aires, 2002.
ser fatal. La energía inicial en este caso es de
2. American Heart Association. FV:TV sin pulso: per-
200 J. sistente / refractaria / recurrente / resistente a las
descargas. En: AVCA Manual para Proveedores.
Tras la cardioversión o desfibrilación se de- Waverly Hispánica S A. Buenos Aires, 2002.
ben corregir los fenómenos que generaron la 3. American Heart Association. Part 6: Advanced
arritmia y se deben usar antiarrítmicos (amio- Cardiovascular Life Support. Section 2:
Defibrilation. Circulation 2000; 102: 90S-94S
darona, lidocaína, procainamida) de manteni-
4. American Heart Association. Taquicardia estable.
miento de manera juiciosa para evitar que se En: AVCA Manual para proveedores. Waverly His-
conviertan en proarrítmicos. pánica SA. Buenos Aires, 2002.
5. American Heart Association. Taquicardia inesta-
ble. En: AVCA Manual para proveedores. Waverly
CONSIDERACIONES FINALES Hispánica SA. Buenos Aires, 2002.
6. Bossaert LL. Fibrilation and defibrillation of the
heart. Br J Anaesth 1997; 79:203-213.
Como se mencionó anteriormente actualmen- 7. Gutiérrez PG. Cardioversión. En: Procedimien-
te hay disponibles en el mercado nuevos ti- tos en la Unidad de Cuidados Intensivos. Editado
pos de desfibriladores con ondas bifásicas. El por PG Gutiérrez. Interamericana Mc Graw-Hill.
concepto de estos desfibriladores se basa en México DF, 2003.

427
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VII

Emergencia hipertensiva

Diego García, MD
Sección de Nefrología
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN EMERGENCIAS HIPERTENSIVAS

L a mayoría de pacientes hipertensos tienen


una elevación relativamente leve de la pre-
sión arterial (PA) sistémica. Sin embargo, se
Cualquier condición capaz de causar hiperten-
sión puede asociarse con una emergencia hi-
pertensiva. El nivel de PA es el determinante
observa hipertensión severa (presión diastó- más crucial del daño a los órganos, pero la
lica 115 mmHg) en cerca del 10% de los ca- tasa de elevación de la misma puede ser im-
sos. Se considera que hay emergencia (cri- portante en pacientes previamente normoten-
sis) hipertensiva cuando existe un nuevo sos como ocurre, por ejemplo, en la pre-
daño vascular progresivo que requiere pron- eclampsia y en las glomérulonefritis.
ta reducción de la PA (en minutos u horas)
para prevenir lesión irreversible o muerte. En En la mayoría de los casos, la elevación se-
cambio, la hipertensión severa asociada con vera de la PA no constituye una crisis hiper-
obvio daño vascular agudo, que coloca al pa- tensiva. En situaciones en que el peligro es
ciente en riesgo si la PA no es controlada en mínimo, la reducción rápida de la PA puede
horas o días, constituye una urgencia acarrear mayor riesgo que beneficio. Ejemplos
hipertensiva (Tabla 1). clínicos son: hipertensión crónica severa

TABLA 1. EMERGENCIAS Y URGENCIAS HIPERTENSIVAS

Emergencias (crisis hipertensiva)


1. Hipertensión maligna
2. Encefalopatía hipertensiva
3. Hemorragia intracraneana
4. Disección aórtica aguda
5. Edema pulmonar agudo con hipertensión
6. Crisis de feocromocitoma
7. Preeclampsia severa o Eclampsia
Urgencias
1. Hipertensión no controlada en pacientes que requieren cirugía de urgencia.
2. Hipertensión post operatoria severa
3. Suspensión de drogas antihipertensivas
4. Trauma craneo-encefálico (TCE) agudo
5. Hipertensión severa sin daño de órganos blanco

428
CAPÍTULO VII: EMERGENCIA HIPERTENSIVA

asintomática; elevación aguda de la PA aso- brecarga de volumen, como ocurre en la


ciada con ansiedad; pseudohipertensión, o hipertensión secundaria a enfermedad renal
hipertensión sistólica en el anciano. o asociada con falla ventricular izquierda, se
recomienda el uso de los mismos. En ausencia
Hay que tener en cuenta dos consideraciones de sobrecarga evidente de volumen se debe
importantes en el manejo inicial de las emer- cuestionar su uso inicial, ya que en muchos
gencias hipertensivas: pacientes con hipertensión sostenida se pro-
duce reducción del volumen intravascular, la
1. ¿Qué tan rápido? cual es particularmente notable en hipertensos
2. ¿Qué tánto reducir la presión arterial? en fase maligna. Tanto el uso previo de diuré-
ticos como la baja ingesta hídrica, por anore-
La mayoría de las drogas disponibles pueden xia, pueden también contribuir a la reducción
normalizar instantáneamente la PA en casi del volumen intravascular: de ahí que la admi-
todas las crisis, pero se han visto complicacio- nistración de diuréticos en estos pacientes
nes reversibles e irreversibles aun en normo- pueda precipitar caidas muy peligrosas de la
tensos. Por tal razón se prefiere una reduc- PA.
ción gradual.

En la mayoría de las situaciones clínicas no TRATAMIENTO ANTIHIPERTENSIVO HABITUAL


es necesaria la normalización completa de la
PA y, con contadas excepciones, ella no debe La ingesta usual de antihipertensivos antes
ser el objetivo del tratamiento. de presentarse la crisis, además de fallar en
controlar la presión arterial, puede haber blo-
queado los reflejos compensatorios o haber
EDAD reducido el volumen intravascular. En este ca-
so, la adición aguda de otro hipotensor puede
Los ancianos, dada la más alta incidencia de reducir la PA drásticamente. En tales situa-
enfermedad coronaria o cerebrovascular ocul- ciones es preferible el uso continuo, y no en
ta o manifiesta, presentan mayor riesgo de forma de bolos, de drogas que actúen rápida-
efectos adversos cuando la PA se reduce rá- mente.
pidamente, acarreando síntomas isquémicos.
La capacidad de autorregulación es reduci-
da, lo que contribuye aún más a la hipoperfu- DURACIÓN DE LA HIPERTENSIÓN
sión con presiones arteriales bajas. Además,
los ancianos tienen una mayor sensibilidad a En pacientes con hipertensión crónica la auto-
los efectos farmacológicos de los antihiper- rregulación del flujo sanguíneo está alterada
tensivos. y la reducción rápida de la PA a valores nor-
males puede producir isquemia cerebral.
Mientras que el flujo cerebral se mantiene con
VOLUMEN DE LÍQUIDOS presión arterial media (PAM) de 60 mmHg en
pacientes normotensos, en los hipertensos se
Se ha preconizado el uso de los diuréticos de puede obtener una caida significativa del flujo
asa como tratamiento primario o adyuvante aún con PAM de 120 mmHg.
de la crisis hipertensiva. En presencia de so-

429
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EVALUACIÓN INICIAL (fundoscopia) para detectar hemorragias,


exudados y papiledema.
El triage temprano es crítico para asegurar la
terapia más apropiada en cada paciente. Se
debe obtener una anamnesis breve y completa EXÁMENES DE LABORATORIO
que incluya la duración y severidad de la hiper-
tensión, los antihipertensivos actuales y el uso Se deben solicitar uroanálisis con sedimento,
de drogas ilegales. Son críticos los antece- perfil bioquímico básico y electrocardiograma
dentes de enfermedad cardiovascular o renal (ECG). El uroanálisis puede mostrar proteinu-
previa u otras afecciones. ria o cilindros hemáticos o celulares. La hipo-
kalemia o hipomagnasemia aumentan el ries-
go de arritmias cardíacas. El ECG puede evi-
EXAMEN FÍSICO denciar isquemia coronaria e hipertrofia ventri-
cular, y un déficit del pulso puede alertar sobre
El examen debe iniciarse con la medición disección de la aorta. La tomografía axial (TAC)
apropiada de la PA. Se deben apreciar los de cráneo está indicada cuando el examen fí-
pulsos carotídeos, braquial, femoral y pedio y sico sugiera un accidente cerebro-vascular.
realizar examen cardiovascular y neurológico
cuidadoso. La evaluación debe establecer el Las características clínicas de las emergen-
grado de compromiso de los órganos blanco cias hipertensivas se enumeran a continua-
afectados y proveer indicios de la existencia ción. El solo nivel de PA no determina la emer-
de una forma secundaria de hipertensión, co- gencia hipertensiva; es el grado de compro-
mo es la enfermedad renovascular. Si ésta se miso de órganos blanco lo que determina la
sospecha, se deben tomar muestras de san- rapidez con que se debe reducir la misma a
gre y orina antes de iniciar la terapia. Se debe un nivel seguro para prevenir o limitar el daño.
hacer un cuidadoso examen de fondo de ojo (Tablas 2 y 3).

TABLA 2. CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS DE LA EMERGENCIA HIPERTENSIVA

Presión Arterial:
Usualmente > 220/140 mmHg
Fundoscopía:
Hemorragias, exudados, papiledema
Neurológico:
Cefalea, confusión, somnolencia, estupor, pérdida visual, convulsiones, déficit neurológico focal, coma.
Cardiaco:
Apex prominente, hipertrofia cardíaca, falla cardíaca congestiva
Renal:
Azohemia, proteinuria, oliguria
Digestivo:
Náusea, vómito

430
CAPÍTULO VII: EMERGENCIA HIPERTENSIVA

TABLA 3. EVALUACIÓN EN TRIAGE

PRESIÓN ALTA URGENCIA EMERGENCIA


PA ≥ 180/110 ≥ 180/110 ≥ 220/140 usualmente
Síntomas Cefalea Cefalea severa Disnea
Ansiedad Disnea Precordialgia
Asintomático Edema Nicturia
Disartria
Debilidad
Conciencia alterada
Examen No daño órgano blanco Daño órgano blanco Encefalopatía
Sin enfermedad Enfermedad cardiovascular Edema pulmonar
cardiovascular evidente. presente/estable. Insuficiencia renal
ACV, Isquemia cardiaca.
Terapia Observe 1-3 horas. Observe 3-6 horas. Laboratorio
Inicie/resuma medicación. Baje PA con droga oral de Línea IV
acción corta.
Aumente dosis de drogas. Ajuste la terapia actual. Monitorice PA
Inicie terapia IV en
urgencias.
Plan Control en 3 días. Evaluación y seguimiento Admisión UCI.
≤ 24 horas.
Trate hasta objetivo
inicial de PA.
Estudios adicionales.

HIPERTENSIÓN MALIGNA Tales cambios revierten con el control de la


Y ENCEFALOPATÍA HIPERTENSIVA PA y se resuelven a los pocos días de trata-
miento.
La hipertensión maligna se caracteriza por la
presencia de hipertensión extrema complica- El evento primario en el desarrollo de estas
da con proliferación de la capa intima y necro- lesiones es el daño a la pared vascular por
sis fibrinoide de las arteriolas y capilares. Es- aumento rápido y marcado de la PA. La disrup-
tos cambios se manifiestan en la retina por ción del endotelio permite que los constituyen-
hemorragias, exudados y en algunos casos, tes del plasma (incluyendo material fibrinoide)
papiledema; en el riñón, por insuficiencia re- penetren la pared del vaso, produciendo ma-
nal aguda y sedimento urinario que contiene yor estrechamiento de la luz. El daño vascular
glóbulos rojos y cilindros granulares o celula- renal, a su vez, contribuye al empeoramiento
res; en el cerebro, por encefalopatía; y, en al- de la hipertensión, a causa de la activación
gunos casos en el organismo en general por del sistema renina-angiotensina acarreada por
anemia. la isquemia renal.

431
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El examen físico en la hipertensión maligna reducirse la dosis, permitiendo el alza de la


revela hipertensión severa, lesiones retinianas misma a un nivel que mantenga la función ce-
y, si existe encefalopatía hipertensiva, signos rebral.
y síntomas no localizados tales como inquie-
tud, cefalea, náusea, vómito o confusión. Ha- La detección de la causa de la disfunción neu-
llazgos neurológicos focales pueden estar pre- rológica es importante, pues las indicaciones
sentes en algunos casos. Las anormalidades de terapia son diferentes si se trata de un ac-
neurológicas son generalmente reversibles en cidente cerebrovascular (ACV) trombótico.
24-48 horas con terapia antihipertensiva efec- Comúnmente la presión arterial se eleva in-
tiva, aunque las hemorragias y los exudados mediatamente después de un ACV, presumi-
retinianos no se resuelven completamente blemente reflejando el intento apropiado de
sino después de semanas o meses. mantener el flujo sanguíneo a las areas isqué-
micas fronterizas. En este caso el reducir la
PA puede causar más isquemia y aumentar el
TRATAMIENTO tamaño de la lesión. Se debe mantener la te-
rapia antihipertensiva a menos que el pacien-
La hipertensión maligna debe ser tratada en te presente falla cardíaca, presión diastólica
el hospital donde, además de reducir rápida- mayor de 120-130 mmHg, o haya evidencia
mente la PA, el posible daño a los órganos de encefalopatía hipertensiva.
blanco puede ser monitorizado cercanamente.
El objetivo de la terapia debe ser reducir la
presión diastólica a un nivel seguro (100-105 HIPERTENSIÓN
mmHg) más que retornar la PA a lo normal, Y HEMORRAGIA INTRACEREBRAL
debido a que la perfusión de órganos vitales
puede estar comprometida por el estrecha- En contraste con el paciente hipertenso con
miento de la luz vascular producido por la en- un ACV isquémico, la hemorragia intracerebral
fermedad aguda. requiere reducción rápida, pero controlada, de
la PA para evitar un sangrado mayor. Existe,
Se inicia terapia parenteral con nitroprusiato sin embargo, el riesgo de exacerbar la isque-
o diazóxido y se agrega terapia oral conven- mia en el tejido cerebral que rodea el área y
cional una vez la PA esté controlada. La tera- aumentar el déficit neurológico. De nuevo, la
pia oral sola puede ser exitosa, pero su uso droga de elección es el nitroprusiato, mien-
debe estar limitado a aquellos pacientes con tras se decide el tratamiento quirúrgico.
hipertensión maligna que estén menos graves
y pueden, por lo tanto, ser tratados como ur-
gencia hipertensiva. DISECCIÓN AÓRTICA AGUDA

En comparación, la encefalopatía hipertensiva La disección de la aorta se inicia por una ras-


es una enfermedad aguda, que atenta contra gadura de la íntima a través de la cual fluye
la vida y requiere reducción inmediata de la sangre hacia la media, lo que resulta en la
PA. El nitroprusiato es la droga de elección, separación de la íntima de la adventicia. La
debido a que su muy corta duración de acción principal causa de mortalidad en este caso no
permite el control minuto a minuto de la PA. es la rasgadura de la íntima per se sino la rup-
Si se observa que los hallazgos neurológicos tura aórtica, generalmente al espacio pericár-
se deterioran a medida que baja la PA, debe dico o a la cavidad pleural izquierda, o la oclu-

432
CAPÍTULO VII: EMERGENCIA HIPERTENSIVA

sión de un vaso que irrigue un órgano mayor, disecciones más distales pueden ser tratadas
como el hígado o el riñón. médica o quirúrgicamente.

El aneurisma disecante se observa más co-


múnmente en el paciente masculino anciano HIPERTENSIÓN Y FALLA VENTRICULAR
con hipertensión crónica que acude, típica- IZQUIERDA AGUDA
mente, con dolor persistente en el pecho o la
espalda. Pulsos distales asimétricos, déficits Cuando se desarrolla hipertensión severa en
neurológicos focales y falla renal aguda pacientes con falla cardíaca congestiva, el
oligúrica pueden estar presentes, de acuerdo aumento de la postcarga eleva los requirimien-
al nivel de disección y de posible oclusión de tos de oxígeno del miocardio. El control inme-
una arteria mayor. diato de la presión arterial, en este caso, re-
duce el riesgo de isquemia miocárdica y, al
El diagnóstico radiológico de la disección agu- mismo tiempo mejora el gasto cardíaco y los
da de aorta es sugerido por un doble contorno síntomas de congestión pulmonar.
aórtico o ensanchamiento del mediastino en
la placa de tórax. Aunque el diagnóstico defini- Se puede lograr una pronta reducción de la
tivo se hace por aortografía, la ecocardiografía PA con agentes antihipertensivos intravenosos
(seguridad del 70-90%), la TAC con contraste (nitroprusiato o nitroglicerina), orales (bloquea-
o la resonancia nuclear magnética (ambos con dores de canales de calcio o inhibidores de la
90%), permiten el diagnóstico rápido, no in- enzima de conversión de la angiotensina I), o
vasor, en la mayoría de los pacientes. sublinguales (dinitrato de isosorbide). No se
deben usar diazóxido o hidralazina, ya que
Si se sospecha disección aórtica, el manejo aumentan el trabajo miocárdico por la estimu-
inicial a corto plazo consiste en la reducción lación refleja de la frecuencia cardíaca y la
de la presión arterial al nivel más bajo posible contractilidad miocárdica. Es importante recor-
que mantenga una adecuada perfusión renal, dar que una reducción excesiva de la PA pue-
cerebral y coronaria. Sin embargo, vasodilata- de exacerbar la isquemia coronaria o causar
dores directos tales como el nitroprusiato o el infarto de miocardio, problema que ha sido ob-
diazóxido no deben ser usados solos, debido servado con la nifedipina.
a que estas drogas estimulan la contractilidad
ventricular, lo cual aumenta las fuerzas tan- Existe controversia acerca de la importancia
genciales aórticas y posiblemente agrava la de la reducción aguda de la PA en el pacien-
disección. El régimen más usado consiste en tes con isquemia o infarto pero sin falla cardía-
nitroprusiato más un β–bloqueador adrenérgi- ca. Se ha sugerido que la hipertensión mode-
co. El labetalol intravenoso o el trimetafan rada o severa en el caso de infarto de miocar-
pueden ser usados como monoterapia debi- dio es transitoria y no ejerce ningún efecto
do a que disminuyen directamente la activi- adverso sobre el curso de la lesión cardíaca.
dad de los β–receptores (Tabla 4). Otros estudios han observado una mortalidad
significativamente mayor y una incidencia más
Una vez estabilizada la presión arterial, se alta de falla cardíaca cuando la hipertensión
debe planear el tratamiento definitivo subsi- severa complica un infarto agudo. Parece ra-
guiente. Se debe considerar cirugía cuando zonable, por tanto, reducir la presión arterial
hay lesión aórtica proximal aguda o cuando gradualmente en estos casos, con nitroprusia-
hay oclusión de un vaso mayor, ya que las to o nitroglicerina endovenosos, siendo cuida-

433
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dosos para no disminuir la presión diastólica hipertensión inducida por catecolaminas. El


por debajo de 90-100 mmHg, ya que una ma- prazosin oral es también útil, pero puede no
yor reducción podría comprometer la perfu- producir control agudo adecuado. Alternativas
sión coronaria. efectivas a los α–bloqueadores son el labetalol
intravenoso y el nitroprusiato. Debe enfatizar-
se que el uso de β–bloqueadores solos en pa-
cientes con hipertensión inducida por cateco-
CRISIS DE FEOCROMOCITOMA laminas puede resultar en estimulación adre-
nérgica sin oposición del músculo vascular
El feocromocitoma es causa rara de hiperten- liso, lo que produce vasoconstricción e hiper-
sión severa y aguda episódica; puede haber tensión más severa. Como resultado, los β–
mínima o ninguna elevación de la PA entre bloqueadores (excepto el labetalol que tiene
uno y otro episodio. actividad bloqueadora a y b) deben ser evita-
dos en este caso, a menos que existan taqui-
El bloqueador α–adrenérgico fentolamina ha arritmias, en cuyo caso se debe administrar
sido la droga de escogencia en pacientes con primero un bloqueador a.

TABLA 4. MANEJO DE EMERGENCIAS HIPERTENSIVAS

AGENTE DOSIS INICIO/DURACIÓN PRECAUCIONES


VASODILATADORES PARENTERALES
Nitroprusiato 0,25-10 µg/kg/min IV, dosis Inmediato/2-3 min Náusea, vómito, intoxicación por
máxima por sólo 10 minutos. después de la infusión.
tiocianatos con uso largo,
metahemoglobinemia.
Gliceriltrinitrato 5-100 µg IV infusión. 2-5 min/5-10 min. Cefalea, taquicardia, vómito, rubor,
metahemoglobinemia.
Nicardipino 5-15 mg/h IV infusión. 1-5 min/15-30 min. Taquicardia, náusea, vómito, aumen-
to presión intracraneana, hipotensión
prolongada.
Diazóxido 50-150 mg IV bolo/ 2-5 min/3-12 hr. Hipotensión, taquicardia, empeora-
15-30 mg/min IV infusión. miento de angina, hiperglicemia.
Fenoldapam 0,1-0,3 mg/kg/min IV infusión. <5 min/30 min. Cefalea, taquicardia, vómito; empeo-
ramiento de angina.
Enalapril 0.625-1.25 mg c/6 hr IV. 15-60 min/12-24 hr. Falla renal en estenosis bilateral de
arteria renal, hipotensión.
INHIBIDORES ADRENÉRGICOS PARENTERALES
Labetalol 20-80 mg IV c/10 min; 5-10 min/15-30 min Broncoconstricción, bloqueo cardía-
hasta 2 mg/min en infusión. co, hipotensión ortostática.
Esmolol 500 µg/kg en bolo IV: o 25-100 1-5 min/15-30 min. Bloqueo primer grado, ICC, asma.
µg/kg/min en infusión. Repetir
en 5 min o infusión hasta 300
µg/kg/min.
Fentolamina 5-15 mg IV bolo. 1-2 min/10-30 min. Taquicardia, hipotensión ortostática.

434
CAPÍTULO VII: EMERGENCIA HIPERTENSIVA

LECTURAS RECOMENDADAS 9. Joint National Committee. The sixth report of the


Committee on the Prevention, Detection, Evalua-
1. Bedoya LA, Vidt DG. Treatment of the hypertensive tion and Treatment of High Blood Pressure (JNC-
emergency. En: The Principles and Practice of VI). Arch Intern Med 1997; 157:2413-2446.
Nephrology. Editado por HR Jacobson, GE Striker, 10. Messerli FH. Hypertension. En: Conn´s Current
S Klahr. Decker, Philadelphia, 1991. Therapy 2003. Saunders. Philadelphia, 2003.
2. Biollaz J, Waeber B, Brunner HR. Hypertensive 11. Munger MA, Rutherford WF, Anderson L, et al.
crisis treated with orally administered captopril. Eur Assessment of intravenous fenoldapam mesylate
J Clin Pharmacol 1983; 25:145-149. in the management of severe systemic hyperten-
3. Calhoun DA. Hypertensive crisis. En: Hyperten- sion. Crit Care Med 1990; 18:502-504.
sion: A Companion to Brenner and Rector’s The 12. Nightingale SL. New labeling for sodium nitropru-
Kidney. Editado por S Oparil, MA Weber. WB sside emphasizes risk of cyanide toxicity (from the
Saunders. Philadelphia, 2000. Food and Drug Administration). JAMA 1991;
4. Catapano MS, Marx JA. Management of urgent 265:847.
hypertension: a comparison of oral treatment 13. Panacek EA, Bednarczyk EM, Dunbar LM, et al.
regimens in the emergency department. J Emerg Randomized, prospective trial of fenoldapam vs
Med 1986; 4:361-368. sodium nitroprusside in the treatment of acute
5. Cressman MD, Vidt DG, Gifford RW, et al. severe hypertension. Fenoldapam Study Group.
Intravenous labetalol in the management of severe Acad Emerg Med 1995; 2:959-965.
hypertension and hypertensive emergencies. Am 14. Paterson-Brown S, Robson SC, Redfern N, et al.
Heart J 1984; 107:980-985. Hydralazine boluses for the treatment of severe
6. Ferguson RK, Vlasses PH. How urgent is “urgent” hypertension in preeclampsia. Br J Obstet
hypertension? [editorial]. Arch Intern Med 1989; Gynaecol 1994; 101: 409-413,
149:257-258. 15. Vidt DG. Management of hypertensive urgencies
7. Flaherty JT, Magee PA, Gardner TL, et al. Compa- and emergencies. In: Hypertension Primer: The
rison of intravenous nitroglycerin and sodium Essentials of High Blood Pressure. Izzo JL, Jr,
nitroprusside for treatment of acute hypertension Black HR, eds. American Heart Association.
developing after coronary artery bypass surgery. Dallas, 1999.
Circulation 1982; 65:1072-1077. 16. Zeller KR, Kunert LV, Matthews C. Rapid reduction
8. IV Nicardipine Study Group. Efficacy and safety of severe asymptomatic hypertension; a
of intravenous nicardipine in the control of postope- prospective, controlled trial. Arch Intern Med 1989;
rative hypertension. Chest 1991; 99:393-398. 149:2186-2189.

435
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VIII

Urgencia hipertensiva

Eduardo Carrizosa, MD
Jefe, Sección de Nefrología
Fundación Santa Fe de Bogotá

L as crisis de hipertensión arterial, con su


correspondiente alarmante sintomatología,
constituyen un volumen significativo de las
tarse en forma pronta e intensa pone en peli-
gro la vida del paciente.

consultas en los servicios de urgencias. Urgencia hipertensiva (UH) es la situación


clínica con hipertensión pero sin compromiso
Hasta hace poco tiempo se hablaba de de los órganos blanco, y requiere tratamiento
hipertensión maligna para describir la situa- pronto pero no tan intenso.
ción caracterizada por cifras tensionales que
ponían en peligro la vida del paciente si no se Hipertensión maligna (HM), término hoy en
obraba con prontitud y certeza. En la actuali- desuso, se refería a pacientes con cifras
dad, se plantean diferencias en esta condición tensionales elevadas, papiledema y cambios
clínica de acuerdo con el compromiso o in- vasculares caracterizados por la hiperplasia
demnidad de los llamados “órganos blanco” de las arterias de mediano y pequeño calibre,
(sistema nervioso, corazón y riñón). descritas como en bulbo de cebolla. Este cua-
dro es hoy parte de la EH.
Generalmente la crisis hipertensiva se presen-
ta con valores de tensión diastólica superio- Hipertensión acelerada, es término que se
res a 120 mmHg; es dos veces más frecuente debe cambiar por UH.
en el sexo masculino entre la cuarta y la quinta
década de la vida. Sin embargo, no se debe
encasillar la crisis hipertensiva en forma abso- FISIOPATOLOGÍA
luta por las cifras de tensión diastólica, pues
cifras menores pueden constituir una crisis, El común denominador está en los vasos
como se observa especialmente en niños; de arteriales: se observa necrosis fibrinoide,
otro lado, cifras superiores a 120 mmHg trombos de plaquetas y fibrina, con trastorno
pueden ser inocuas en un adulto hipertenso en la irrigación de los órganos e hipoxia.
crónico.
Para llegar a la lesión vascular, hay factores
locales (prostaglandinas, factor del crecimien-
DEFINICIÓN to, radicales libres y otros) responsables del
daño endotelial con exposición del colágeno
Emergencia hipertensiva (EH) es la situa- y agregación plaquetaria, aparición de facto-
ción clínica de hipertensión acompañada por res mitógenos y proliferación miointimal, que
compromiso de órganos blanco, que de no tra- evoluciona a daño endotelial. Los factores

436
CAPÍTULO VIII: URGENCIA HIPERTENSIVA

sistémicos (sistema renina-aldosterona, Del riñón, hematuria, proteinuria e insuficien-


catecolaminas y otros) responsables de pro- cia renal.
ducir natriuresis e hipovolemia, estimulan el
sistema vasopresor y dan como resultado el Del sistema hematológico, anemia
daño vascular. hemolítica microangiopática y en ocasiones,
coagulación intravascular diseminada.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS
ETIOLOGÍA
Los síntomas están relacionados con los ór-
ganos afectados: Tanto la hipertensión arterial esencial como
cualquiera de las formas de hipertensión
Del sistema nervioso central, retinopatía, arterial secundaria (Cuadro No. 1), en un mo-
cefalea en casco, convulsiones tónico mento dado de la evolución, pueden desarro-
clónicas, estupor, coma, hemorragia cerebral. llar EH o UH.

Del corazón, incremento de la postcarga, in-


suficiencia cardiaca, angina e infarto del
miocardio.

CUADRO No. 1. CAUSAS SECUNDARIAS DE HIPERTENSIÓN ARTERIAL

Renales: síndrome nefrítico agudo y crónico, glomerulonefritis aguda y crónica, tumores secretores de renina, renovascular.
Endocrinas: feocromocitoma, síndrome de Cushing, hiperaldosteronismo.
Embarazo: preeclampsia, eclampsia.
Medicamentos: inhibidores de la monoaminooxidasa, anticonceptivos orales, supresión de medicamentos (beta bloqueadores,
inhibidores de la enzima convertidora, inhibidores que actúan a nivel central).
Tóxicos: cocaina, LSD.

TRATAMIENTO to bien dirigido. En la EH debe internarse al


paciente en unidad de cuidados intensivos,
La principal pregunta es qué tanto y con qué monitorizar en forma permanente la tensión
prontitud se deben bajar las cifras tensionales. arterial y usar medicamentos intravenosos
Muchas veces el éxito se mide por la presen- para llevar las cifras tensionales a valores
cia o ausencia de complicaciones, particular- cercanos a la normalidad en el término de una
mente cerebrovasculares y de arterias hora (Cuadro No. 2). En la UH no son obliga-
coronarias; ante tales situaciones, llegar a torios el tratamiento en unidad de cuidados
hipotensión es contraproducente. intensivos ni monitorización permanente de las
cifras tensionales; se pueden usar medica-
El examen clínico debe llevar a la diferencia- mentos por vía oral y dar más tiempo al mejor
ción entre EH y UH, para iniciar un tratamien- control de la tensión arterial (Cuadro No. 3).

437
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CUADRO No. 2. MEDICAMENTOS INDICADOS PARA LA EH.


TODOS LOS MEDICAMENTOS SON PARA USO INTRAVENOSO.

Medicamentos Dosis Inicio Duración Efectos secundarios


Nitroprusiato 10 mcg/k/m Inmediato 1-2 min Náusea, vómito, calambres, toxicidad
tiociatos
Nitroglicerina 5-100 mcg/m 2-5 min 3-5 min Cefalea, vómito, metahemoglobinemia.
Hydralacina 10-20 mg/m 5-15 min 2-6 h Cefalea, vómito, hipotensión, taquicardia.
Labetalol 20-80 mg/m 5-10 min 2-6 h Vómito, broncoespasmo bloqueo AV,
bolos c/10m hipotensión.
Nicardipina 5-15 mg/h 5-10 min 1-h Cefalea, nausea, flushing, taquicardia,
flebitis local
Diazoxido 50-100 mg 2-4 min 6-12 h Náusea, flushing, taquicardia, dolor
bolo torácico.
Enalapril 1.25-5 mg 15 min 6h Hipotensión, respuesta variable.
cada 6 h
Trimetafan 0,5 mg/m 1-5 min 10 min Globo vesical, apnea, visión borrosa
Fentolamina 5-10 mg 1-2 min 15-60 min Taquicardia, flushing, cefalea
Bolo

CUADRO No. 3. MEDICAMENTOS INDICADOS PARA LA UH

Medicamento Dosis Inicio Pico Duración Efectos secundarios


Clonidina 0,15 mg 30-60 min 2h 8-12 h Sedación, sequedad de
boca, ortostastismo
Captopril 6,25-50 mg 15 min 60 min 2-6 h Taquicardia. Insuficiencia
renal, hipotensión.
Nifedipina 5-20 mg 5-15 min 15-30 min 3-6 h Cefalea, taquicardia,
ortostastismo.
Labetalol 200-400 mg 15-45 min 60 min 2-6 h Ortostatimo, broncoespasmo

La EH se puede presentar en situaciones muy las zonas isquémicas; como el flujo cerebral
específicas y en ellas está indicado el uso de es proporcional a la presión de perfusión, se
determinado hipotensor de la siguiente ma- puede empeorar el déficit neurológico. No hay
nera: estudios que demuestren que la disminución
abrupta de las cifras tensionales mejore la
Accidente cerebro vascular: es frecuente evolución neurológica; el uso de hipotensores
que el momento de la lesión curse con puede ser necesario más por el compromiso
hipertensión; se debe ser prudente en la dis- de otros órganos, y en tal caso se prefiere el
minución de las cifras tensionales por la pér- nitroprusiato por su corta acción; se recomien-
dida de autorregulación del flujo cerebral en da monitorizar la presión intracraneal.

438
CAPÍTULO VIII: URGENCIA HIPERTENSIVA

Infarto de miocardio: deben evitarse los tratamiento de elección. Deben usarse con
fármacos que produzcan taquicardia, porque prudencia bloqueadores alfa y beta, porque
aumenta la demanda miocárdica de oxígeno; producen hipertensión paradójica.
se recomienda la nitroglicerina. El nitroprusiato
reduce el flujo sanguíneo en la zona de este- Eclampsia: el fármaco de elección es la
nosis coronaria. hidralacina y en segunda instancia labetalol.
El sulfato de magnesio, si bien baja la tensión
Disección aórtica: si se instaura un tratamien- arterial, está más indicado para la crisis
to intenso y efectivo, se corre el peligro de disrrítmica.
aumentar la disección del vaso, especialmente
con los medicamentos indicados para la UH:
debe tenerse precaución con los fármacos que LECTURAS RECOMENDADAS
aumentan la frecuencia cardiaca como la
hidralacina, o con los medicamentos que au- 1. Brady H, Wilcox C. Therapy in Nephrology and
Hypertension. En: Atlas of Hypertensive
mentan la postcarga como el nitroprusiato,
Emergencies. Editado por S Mann S. WB
porque pueden empeorar la disección; la elec- Saunders Company. Philadelphia, 1999.
ción seria el uso de nitropusiato asociado a 2. Calhoun C, Oparil S. Treatment of hypertensive
beta bloqueador. crisis. N Eng J Med 1990; 323:1177-1183.
3. Cherney D, Straus S. Management of patients with
Esclerosis sistémica progresiva: suele es- hypertensive urgencies and emergencies: A
tar comprometido el riñón y siempre cursa con systematic review of the literature. JGIM 2002;
elevación de la renina plasmática. Son de elec- 17:937-945.
4. Kaplan N, Lieberman E, Neal W. Kaplan’s Clinical
ción los fármacos que actúen sobre dicho ór-
Hypertension. 8 Edtion. Williams & Wilkins.
gano, como los inhibidores de la enzima Philadelphia, 2002.
convertidora. 5. Zampaglione B, Pascale C, Marchisio M, et al.
Hypertensive urgencies and emergencies.
Feocromocitoma: el estimulo principal es alfa Prevalence and clinical presentation. Hypertension
adrenérgico, lo que hace a la fentolamina el 1996; 27:144-147.

439
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IX

Administración de fármacos en la urgencia


cardiovascular

Zenaida M. Montañez Puentes, Enf.


Especialista en Cardio-Respiratorio
Fundación Cardioinfantil, Bogotá.

INTRODUCCIÓN

L a enfermera es responsable de la correc-


ta administración de los fármacos y de la
notificación de sus reacciones adversas. El su-
• Unificar criterios de actuación y despejar
dudas.
• Crear conciencia del papel decisorio sobre
ministro incorrecto de fármacos es uno de los la administración correcta de medicación,
errores más comunes en la medicación. como una actividad individual y de asesoría.
• Proteger al paciente de las consecuencias
Esta guía muestra la importancia de poseer de incompatibilidades medicamentosas.
un conocimiento profundo de una de las princi-
pales tareas de enfermería en urgencias y en
la unidad de cuidado intensivo (UCI): la correc- DEFINICIÓN DE TÉRMINOS
ta administración de los medicamentos, sus
interacciones físicas y químicas, los criterios • Estabilidad: se considera que dos compo-
para decidir cuál infusión utilizar y cuándo pa- nentes de una mezcla son estables cuan-
sarlos por una u otra de las luces de un caté- do, tras realizar determinaciones químicas
ter intravenoso, dado que en muchas ocasio- de concentración, ésta se mantiene en un
nes la escasez de accesos venosos obliga a valor mayor de 90%, o sea, que la descom-
combinaciones peligrosas. Aunque no se insi- posición deber ser menor de 10%.
núa la necesidad de disponer de tantas líneas • Inestabilidad: reacciones químicas irreversi-
intravenosas como del número de fármacos bles que dan lugar a productos degradados
que reciba el paciente, sí se deben diferen- que pueden resultar en fracaso terapéutico
ciar la naturaleza y el comportamiento de cada y toxicidad; descomposición mayor de 10%.
uno a fin de resolver los problemas diarios que • Reconstituir: adicionar agua bidestilada o
plantea la co-administración de la medicación. un disolvente especial a un medicamento
liofilizado o en polvo.
• Diluir: adicionar líquido a un medicamento
OBJETIVOS en solución con el objeto de disminuir su
concentración.
• Mejorar la calidad científica y técnica de la • Sinergismo: es el incremento en la respues-
acción de administrar medicamentos. ta a un fármaco por la administración si-
multánea de otro.

440
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

• Antagonismo: cuando se disminuye o anula NORMAS PARA LA ADMINISTRA-


el efecto de un fármaco por la acción de otro. CIÓN DE FÁRMACOS POR VIA ORAL
• Error de medicación: administración de un
medicamento diferente, o en forma inapro- INTERACCIONES FARMACOALIMENTARIAS
piada respecto a la prescripción médica.
Se refiere a cualquier acontecimiento evi- Dentro de las interacciones farmacológicas las
table que pueda conducir a un mal uso de que menos se tienen en cuenta en la práctica
los fármacos o poner en peligro al pacien- clínica son las fármaco-alimentarias; esto com-
te. Los errores más comunes son: promete, con relativa frecuencia, la actuación
- Programación de varios antibióticos a la de la enfermera debido a que, generalmente,
misma hora. la prescripción médica especifica si un fárma-
- Diluciones que permanecen almacena- co debe ser administrado en presencia de ali-
das por más de 24 horas. mentos o fuera de las comidas. La decisión
- Diluciones de drogas vasoactivas o de de la enfermera en este sentido, puede reper-
antibióticos insuficientes. cutir en la máxima eficacia farmacológica o,
- Utilización del mismo sistema para la ad- por el contrario, en su disminución. Asimismo,
ministración de diversos fármacos. puede tener implicaciones iatrogénicas.
- Incumplimiento del horario pautado.
La administración de medicamentos con las
La prevención de los errores de medicación comidas o en un horario cercano, puede afec-
se logra mediante las siguientes intervencio- tar la absorción de los fármacos, la farmacoci-
nes: nética y la farmacodinamia. La presencia de
alimentos, así como su consistencia y compo-
• Cinco correctos: nemotecnia utilizada para sición, puede modificar sustancialmente la bio-
recordar las precauciones universales en disponibilidad de los medicamentos.
la administración de los medicamentos: A continuación se ofrecen algunas pautas so-
Fármaco correcto, Dosis diaria correcta, bre el momento y la forma de dar la “pastillita”
Hora correcta, Vía correcta y Paciente co- que, aunque parece tan simple, tiene sus pe-
rrecto. culiaridades; conocerlas y practicarlas diferen-
• Evitar la coadministración. cia al profesional idóneo de los empíricos.
• Manejar vías alternas de administración de
medicamentos. Intervalos de administración: es diferente ad-
• Ajustar la cantidad del compuesto a ser ministrar un medicamento cada ocho horas
administrado (adecuar las diluciones según que tres veces al día. Hay medicamentos que
pautas individuales de cada paciente). se deben administrar respetando intervalos re-
• Revisar la programación del tratamiento en gulares, por ejemplo, los antiarrítmicos que
cada turno. precisan ejercer su acción en forma sostenida
• Antes de administrar el fármaco se debe y que tienen un estrecho margen terapéutico.
preguntar: ¿Qué efecto tiene?, ¿Por cuál La irregularidad en los intervalos de adminis-
vía se pude administrar?, ¿Cuáles son las tración puede producir fluctuaciones que lle-
posibles reacciones adversas?, ¿Qué otros ven a concentraciones infraterapéuticas o a
fármacos pueden causar sinergismo o an- picos plasmáticos tóxicos (amiodarona, flecai-
tagonismo?, ¿Cuál diluyente se debe usar nida, propafenona, quinidina, mexiletina o di-
y en qué cantidad? y ¿Qué incompatibili- sopiramida, dipiridamol, bromocriptina,
dad existe con otros medicamentos? clorazepam y clonidina).

441
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El control del dolor crónico requiere regulari- Algunas veces no es importante que los me-
dad; sin embargo, en ciertos casos es preferi- dicamentos se tomen con o sin alimentos, pero
ble administrar dosis más altas antes de acos- sí es que se administren siempre en las mis-
tarse y respetar el descanso nocturno. mas condiciones; en este caso, es mejor ha-
cerlo coincidir con una comida y crear hábitos
Horarios de administración: el organismo si- que ayuden a mejorar el cumplimiento. Por
gue ritmos biológicos que hacen que, en cier- ejemplo, la digoxina tiene un índice terapéuti-
tos casos, no sea lo mismo administrar un co bajo y la administración conjunta con ali-
medicamento a una hora que a otra. mentos puede aumentar o disminuir la biodis-
ponibilidad. Otros medicamentos son: propafe-
Administrar en la mañana:
nona, calcitriol, fenobarbital, fluoxetina, mor-
• Diuréticos para que su acción no interfiera
fina retardada y ciclosporina.
con el descanso.
• Corticoides debido a la mayor secreción
Administración en ayunas: significa tomarlo
fisiológica de cortisol.
una hora antes o dos horas después de la in-
Administrar en la noche: gestión de cualquier alimento. Toda adminis-
• Ranitidina en dosis única, para neutralizar tración que no se ajuste a esta definición no
la mayor acidez nocturna. es “en ayunas”.
• Laxantes, que ejercen su acción en la ma-
ñana siguiente. Administración inmediatamente antes de las
• Antidepresivos tricíclicos, neurolépticos y comidas: no significa en ayunas, sino 20-30
benzodiacepinas, cuyos efectos sedantes minutos antes de la ingestión de alimentos.
son mejor tolerados. Por ejemplo:
• Antihipertensivos para minimizar la hipoten-
sión ortostática. • Sucralfato, que proporciona protección lo-
• Hipolipemiantes, porque coincide con el cal previa a la secreción ácida inducida por
aumento de la síntesis endógena de la ingestión.
colesterol. • Sulfonilureas, para mejorar la disponibili-
dad de la glucosa.
Administración con alimentos: hacer coincidir
la toma de fármacos por vía oral con la ingesta Administración después de las comidas: 30-
de alimentos es una costumbre habitual que 45 minutos después de la ingesta. Por ejem-
tiene ventajas e inconvenientes. plo, los antiácidos actúan neutralizando la
acidez de la secreción gástrica tras la ingesta.
Ventajas:
• Mejora la deglución, la tolerancia gástrica Líquidos: la absorción de los medicamentos
y el cumplimiento terapéutico. sólidos aumenta si se administran con un vo-
• En algunos casos mejora la absorción y/o lumen abundante de agua, porque se facilita
la acción del medicamento. la deglución y se mejora la solubilidad del fár-
maco, minimizando efectos adversos como la
Inconvenientes: toxicidad renal, cálculos (sulfamidas), cistitis
• Los intervalos de administración son irre- hemorrágica (ciclofosfamida), esofagitis o in-
gulares. tolerancia gástrica. Por ejemplo, el ácido acetil
• Puede interactuar con los alimentos y dis- salicílico se presenta en comprimidos eferves-
minuir o retrasar la absorción. centes para obligar a la ingestión de un volu-

442
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

men suficiente de agua. También, se reco- NORMAS GENERALES


mienda con el uso de laxantes.
• Lavado de manos antes del procedimiento.
El líquido debe ser siempre agua. La leche, • Utilizar técnica aséptica en la mezcla de
debido a su contenido de calcio, puede dismi- medicamentos.
nuir la absorción hasta en 50%, formando • Instaurar un acceso venoso apropiado.
complejos insolubles con numerosas medica- • Preparar jeringas con solución salina nor-
ciones (hierro y potasio). Igualmente, no debe mal (SSN).
ingerirse junto con medicaciones con cubier- • Evitar bolos de inotrópicos en la vía intrave-
ta entérica o antiácidos, porque produce un nosa donde se está infundiendo otro medi-
aumento del pH gástrico que puede ocasio- camento. Utilizar las conexiones más
nar la disolución prematura de estas formas próximas.
farmacéuticas. • El goteo inotrópico debe estar en una vía
independiente de la bolos de medicamen-
Los zumos, que son buenos para enmasca- tosos.
rar sabores, en algunos casos pueden inter- • Destinar un acceso único para la adminis-
ferir la absorción o alterar la estabilidad de los tración de bicarbonato o furosemida.
medicamentos lábiles al pH ácido. • Establecer y verificar la dosificación del me-
dicamento, mediante el uso de las siguien-
El café y el té pueden formar precipitados con tes fórmulas:
los antipsicóticos fenotiazínicos y butirofeno-
nas (haloperidol); también, con el hierro. Pue- Cálculo de la velocidad de administración de
den potenciar la acción de algunos analgési- medicamentos con bomba de infusión:
cos como el ácido acetilsalicílico y parace-
tamol. ml/h= dosis X peso del paciente X 60 minutos
Concentración del medicamento diluido

NORMAS PARA LA ADMINISTRACIÓN Cálculo de la dosis administrada cuando la


DE FÁRMACOS EN PERFUSIÓN velocidad de infusión es conocida:
INTRAVENOSA (IV) CONTINUA Dosis= ml/h X concentración del medicamen-
E INTERMITENTE to diluido / peso / 60 minutos

FORMAS DE ADMINISTRACIÓN • Para la administración de analgésicos, se


debe conocer la percepción del propio pa-
IV directa: en bolo. ciente, y tener en cuenta el llanto, la ex-
IV intermitente: desde 15 minutos hasta va- presión facial y la postura.
rias horas. • En el paciente sedado, vigilar tensión
IV continua: 24 horas o más, diluciones en arterial y explicarle los procedimientos que
grandes volúmenes. se vayan a realizar. Recuerde: el paciente
sedado puede oír, sentir y recordar voces.
La compatibilidad IV puede depender de las • Secuencia de la administración: dejar los
concentraciones relativas de las soluciones, espacios temporales precisos entre medi-
el orden, la velocidad y la agitación de la caciones (dos horas entre antibióticos) y
mezcla. lavar la vía.

443
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Respetar el tiempo necesario para la per- • El tiempo de posible contaminación de las


fusión (30-60 minutos en antibióticos, vita- diluciones en soluciones glucosadas es de
mina K y calcio), con el propósito de evitar 12 horas y en SSN es de 24 horas.
reacciones alérgicas o sobredosis. • Considerar los preparados intravenosos co-
• Proteger las venas periféricas de sustan- mo vehículos de infección, especialmente
cias irritantes por su tonicidad y osmolari- de candida y Enterobacteria-Klebsiella. La
dad; determinar y separar luces ácidas y contaminación microbiana accidental se re-
luces básicas, tener en cuenta la solución laciona con el uso de equipo adicional y
de base que se está pasando. con la manipulación del sistema intraveno-
• Cambio de equipos: depende del material so. En particular, las bacterias Gram negati-
y la marca (cada 48 horas en antibióticos, vas pueden multiplicarse con rapidez en
cada 24 horas en la nutrición parenteral y fluidos simples como la dextrosa al 5% y
cada 12 en el propofol). El cambio diario en preparaciones que contengan lípidos;
de las soluciones y de los sistemas, según el crecimiento de contaminantes fúngicos
la duración de cada uno, es una práctica como candida es muy rápido, aumentando
estándar bien documentada en la reduc- el riesgo de fungemia.
ción de contaminantes. • Administrar las drogas vasoactivas a tra-
• Elección del sistema adecuado para cada vés de luces centrales por su poder irritan-
medicación (normal, opaco o de baja ab- te, el bicarbonato en una vía individual de-
sorción). bido a su poder precipitante y la furosemida
• Utilización de filtros para nutrición parente- diluida y por vía periférica, puesto que cris-
ral y farmacoterapia, según el tamaño del taliza el catéter.
poro. • Algunos medicamentos por su labilidad an-
• Dilución de los medicamentos de acuerdo te ácidos o alcalinos, no pueden mezclar-
con el balance hídrico del paciente: a mayor se con compuestos contrarios a su pH, a
dilución menor posibilidad de interacción. menos que la solución esté tamponada. De
• Vigilar la precipitación: puede ocurrir en manera esquemática, las columnas opues-
cualquier momento. tas no deben coincidir en la misma luz intra-
• Confirmar en cada turno que las conexio- venosa. Los antibióticos actúan como ba-
nes estén bien ajustadas. ses o como ácidos; para su mejor manejo
• Revisar en cada turno la correcta progra- se siguen normas comunes para todos.
mación del tratamiento. • En algunas ocasiones, el total de líquidos
• Las diluciones se consideran estables du- administrados puede ser elevado, descom-
rante 24 horas, excepto, insulina, nitrogli- pensando el balance hídrico diario; ante tal
cerina y propofol, que son estables duran- situación es preferible disminuir los líqui-
te 12 horas. La descomposición del princi- dos que no contienen el agente (“líquidos
pio activo provoca pérdida en la acción te- limpios”), y diluir correctamente la antibió-
rapéutica. tico terapia; en pacientes con restricción de
• Agitar el envase cuando se incorporen fár- líquidos (edema agudo de pulmón) se dilu-
macos a fluidos para obtener una solución yen en menor cantidad y se perfunden len-
homogénea y evitar el riesgo de sobredo- tamente. Nunca se ha de perder la visión
sificación durante la primera parte de la per- del balance hidro-electrolítico del enfermo,
fusión. Extraer la misma cantidad de suero a fin de actuar según sus necesidades prio-
que de medicación a introducir. ritarias.

444
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

• No adicionar medicamentos a productos MONITORÍA DE MEDICAMENTOS


sanguíneos.
• No adicionar medicamentos al Manitol. • Digoxina: vigilar concentraciones sanguí-
• No mezclar medicamentos con bicarbonato. neas; no tomar la muestra durante las seis
horas siguientes a la perfusión.
INFUSIÓN DE BOLOS DE MEDICAMENTOS • Heparina: control del recuento plaquetario.
• Fenitoína: vigilar concentraciones sanguí-
• Desinfectar el punto de conexión antes y neas.
después de la administración. • Furosemida: observar hipocalcemia.
• Lavar la vía con SSN antes y después de
la administración; previene la interacción MATERIALES PARA ADMINISTRACIÓN
del medicamento administrado con la per-
fusión de base. • Utilizar material de baja absorción, como
• Diluir en jeringas de 10 o 20 ml; evita picos el vidrio, para la administración de diaze-
tóxicos e hiperosmolaridad en la vena. pam, dobutamina, dopamina, heparina,
• Evitar la administración de bolos por luces insulina, nitroglicerina y clorpromazina.
que ya estén recibiendo drogas vasoactivas • Equipos fotorresistentes y proteger la so-
o anticoagulantes, a fin de evitar bolos de lución de la luz: nitroglicerina, nitroprusiato
éstos. y furosemida.
• Utilizar el puerto proximal; con ello se evita • Disolver en solución de dextrosa en agua
dejar restos distales del principio activo in- destilada: heparina, lidocaína, nitrogliceri-
yectado. na, nitroprusiato y noradrenalina. La dex-
• Inyectar durante 1-2 minutos; el exceso de trosa protege el principio activo del fárma-
velocidad puede producir shock, debido a que co de la oxidación.
las concentraciones plasmáticas aumentan • Filtros de 0,2 micras para nutrición
hasta alcanzar una concentración tóxica. Tam- parenteral.
bién se evita generar presiones excesivas. • Filtros de 1,2 micras para mezclas con
• Ciertos fármacos nunca deben ser admi- lípidos.
nistrados en bolo. Por ejemplo, soluciones • Jeringas para perfusión.
electrolíticas como el cloruro de potasio.

VÍAS HEPARINIZADAS MEDICAMENTOS DEL SISTEMA


CARDIOVASCULAR
• Desinfectar el tapón antes y después de la
infusión. ANTIARRÍTMICOS: la clasificación más am-
• Lavar la vía con SSN antes y después de pliamente aceptada se fundamenta en las pro-
la perfusión. piedades electrofisiológicas y/o su supuesto
• Heparinizar, nuevamente, al finalizar la in- mecanismo de acción.
fusión.

445
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. CLASIFICACIÓN DE LOS ANTIARRÍTMICOS

CLASE MECANISMO DE ACCIÓN FÁRMACOS


I Anéstesicos locales.
IA Prolonga potencial de acción. Quinidina, procainamida, disopiramida.
IB Acortan potencial de acción. Lidocaina, tocainida, mexiletina, difenilhidantoina.
IC No afecta potencial de acción. Encainida, flecainida.
II Antagonistas de receptores beta adrenérgicos. Betabloqueadores.
III Incrementa refractariedad. Amiodarona, bretilio.
IV Inhiben corriente lenta. Anticálcicos.

TABLA 2. ANTIARRÍTMICOS

MEDICAMENTO DOSIS ACCIÓN / INDICACIÓN a. PRECAUCIONES


PROCAINAMIDA • Paro cardiaco: 20 mg/ • Está indicada en taquicardia • Disminuye la contractilidad
min IV (dosis máxima 17 ventricular en paciente estable, miocárdica en pacientes con
mg/kg). taquicardia supraventricular función ventricular deteriorada.
• FV/TV refractaria: 100 paroxística (TSVP) que no res- • En dosis altas puede producir
mg IV y repetir la dosis ponde a adenosina ni maniobras hipotensión.
cada 5 minutos. vagales. • Proarrítmico especialmente en
• Infusión de manteni- • Fibrilación auricular con res- estados de IAM, hipocalemia o
miento 1 a 4 mg/min. puesta rápida en síndrome de hipomagnesemia.
Wolff-Parkinson-White. • Usar con precaución con otros
medicamentos que prolongan el
intervalo QT (por ejemplo
amiodarona).
• Reducir la dosis en pacientes
con enfermedad renal o
cardiaca (dosis máxima 12 mg/
kg y dosis de mantenimiento 1-
2 mg/min).

LIDOCAINA Iniciar con 1,0-1,5 mg/kg • Paro cardiaco por TV/FV. • En presencia de falla cardiaca,
(sin epinefrina). IV en bolo. Repetir la do- • Tratamiento agudo de las cirrosis y edad avanzada, la
Xylocaina® sis cada 5-10 minutos, arritmias ventriculares. vida media puede prolongarse
frasco-ampolla al 2% por hasta 3 mg/kg. Continuar y facilitar toxicidad en infusión
50 ml (1 ml=20 mg/ml). infusión de 1-4 mg/min de dosis altas después de 24
Artículo I. horas. Los efectos tóxicos son:
temblor, visión borrosa, cefalea,
confusión, disforia, náusea,
parestesias y convulsiones.
• Mínimos cambios hemodinámi-
cos a dosis terapéuticas.
• Dilución en DAD 5% o SSN.
• Preparación: 375 ml de solu-
ción + 125 ml de lidocaina al
2%. Concentración: 5 mg/ml

446
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

TABLA 2. ANTIARRÍTMICOS

MEDICAMENTO DOSIS ACCIÓN / INDICACIÓN a. PRECAUCIONES


• Valorar cambios en el ritmo
cardiaco y frecuencia cardiaca.
• Vigilar signos de toxicidad.

(a) PROPANOLOL Dosis total 0,1 mg/kg IV • Antagonistas beta adrenérgicos. • Falla cardiaca, en pacientes
Amp. 1 mg / 1ml lento dividido en tres dosis • Administrar a los pacientes con con reducción previa en la fun-
iguales cada 2-3 minutos. sospecha de IM y angina ines- ción sistólica e hipotensión.
No exceder 1 mg/min. table. • Contraindican su uso: diabetes
• Aumentan el umbral para insulino dependiente, broncoes-
fibrilación ventricular en IAM. pasmo, o su antecedente, en-
METOPROLOL Dosis inicial 5 mg IV lento • Disminuyen la frecuencia cardía- fermedad arterial periférica se-
Betaloc ® Amp. 5 mg / 5 cada 5 minutos hasta 10- ca, presión arterial y contractili- vera, trastornos en la conduc-
ml 15 mg. dad miocárdica. ción AV o sinoatrial, enfermedad
• Tratamiento de taquiarritmia de Raynaud, frecuencia cardia-
(b) ESMOLOL Iniciar con 0,5 mg/kg en 1 supraventricular y control de la ca menor de 60 por minuto y
Amp. 100 mg / 10 ml (10 minuto y continuar infusión respuesta ventricular en fibrila- presión arterial sistólica menor
mg/ml). de 0,05 mg/kg/min. Dosis ción y flutter auricular. Los beta- de 100 mm Hg.
máxima 0,3 mg/kg/min. bloqueadores son de segunda • La administración conjunta con
Preparación: 90 ml de elección después de adenosina, bloqueadores de canales de
LABETALOL SSN + 1 ampolla de esmo- diltiazem y digitálicos. calcio tales como diltiazem y
100 mg / 20 ml (5 mg/ml). lol. Concentración: 1 mg/ • Útil como agente coadyuvante verapamilo puede causar seve-
ml. en terapia fibrinolítica. ra hipotensión.
10 mg labetalol IV en 1-2 • El esmolol por su corta vida me- • Pueden cusar depresión
ATENOLOL minutos. Repetir cada 10 dia (9 minutos) es un betablo- miocárdica.
minutos hasta una dosis queador de gran importancia; útil • Monitoría cardiaca y respirato-
máxima de 150 mg o dar en la taquicardia supraventricu- ria durante la administración.
(c) AMIODARONA una dosis inicial como bolo lar, en prevención de la taquicar- • A dosis altas, disminuye la re-
y continuar infusión de 2-8 dia sinusal en la inducción anes- sistencia vascular periférica,
(d) Cordarone® mcg/min. Preparación: 80 tésica, intubación orotraqueal, con severa hipotensión arterial;
Amp. 150 mg/ml ml de SSN + 1 ampolla de hipertensión perioperatoria y en generalmente, no produce falla
labetalol. Concentración: 1 pacientes con enfermedad coro- cardiaca, aún en pacientes con
mg/ml.Dosis inicial de 5 naria que van a someterse a pro- disfunción previa.
mg IV lento (en 5 minutos). cedimientos invasivos. • Efecto inotrópico negativo.·
Esperar 10 minutos y ad- • Crisis hipertensiva y en las pri- Puede prolongar el intervalo
ministrar una segunda do- meras horas de IAM. QT.
sis de 5 mg lento (en 5 mi- • Indicada en una gran variedad • El uso crónico puede ocasionar
nutos). de taquiarritmias auriculares y neumonitis intersticial, fotosen-
• Bolo IV 300 mg. Repetir ventriculares y control de arrit- sibilidad, alteraciones en la fun-
bolo IV de 150 mg en 3- mias auriculares rápidas en pa- ción tiroidea y hepática y acu-
5 minutos (dosis acumu- cientes con insuficiencia VI mulación de microdepósitos
lada máxima 2,2 g IV / 24 cuando la digoxina ha sido inefi- corneanos.
horas). caz. • Dilución en DAD 5%.
• Taquicardia de complejo • FV/TV sin pulso refractarias a la • Administrar, preferiblemente,
ancho: descarga eléctrica. por vía central por el riesgo de
- Infusión rápida: 150 mg • Tratamiento de TV polimorfa y flebitis y necrosis en caso de
IV en 10 minutos. Repe- taquicardia de complejo ancho extravasación accidental.
tir cada 10 minutos se de origen incierto.

447
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 2. ANTIARRÍTMICOS

MEDICAMENTO DOSIS ACCIÓN / INDICACIÓN a. PRECAUCIONES


gún necesidad.-Infusión • TV estable cuando la cardiover-
lenta: 360 mg IV en 6 ho- sión no es exitosa, especialmen-
ras (1 mg/min).-Infusión te en disfunción VI.
de mantenimiento: 540 • Coadyuvante de la cardioversión
mg IV en 18 horas (0,5 eléctrica de TSV y TSVP.
mg/min). • Revertir la taquicardia auricular
ectópica o multifocal con función
VI preservada.
• Controlar la frecuencia en la FA
o aleteo auricular cuando fraca-
san otros tratamientos.
(e) ADENOSINA, Bolo IV rápido de 6 mg en • Rápido metabolismo y brevedad • El malestar torácico, la disnea
Adenocard®Amp. 6 mg 1-3 segundos, seguido del de acción, con una vida media y el rubor son transitorios.
/ 2 ml lavado de la vena con 20 de 15-20 segundos. • Periodos breves de asistolia o
ml de SSN y elevación de • Vasodilatador coronario. bradicardia y ectopia ven-
la extremidad. Si es nece- • Efecto antiadrenérgico y tricular.
sario, administrar una se- cronotrópico negativo. • No debe administrarse a pa-
gunda dosis de 12 mg en • Usos: primer fármaco para las cientes con asma.
1-2 minutos y una tercera formas de TSVP de complejo an- • No se debe usar en taquicardia
dosis de 12 mg. gosto y taquicardia supraventri- inducida por intoxicación con
cular que involucra el nodo AV fármacos.
en el circuito de reentrada. No • Colocar el paciente en posición
revierte la FA, aleteo auricular o de Trendelenburg ligeramente
la TV. invertida antes de la adminis-
tración del medicamento.
VERAPAMILO Bolo IV de 2,5-5,0 mg en 2 • Bloqueador de los canales del • Hipotensión, bloqueo AV.
Isoptin® minutos. Segunda dosis de calcio. • Contraindicado en falla cardía-
5-10 mg, en 15-30 minu- • Medicamento de segunda elec- ca, enfermedad del nodo sinu-
tos. Dosis máxima 20 mg. ción después de la adenosina sal, bloqueo AV, Wolf-Parkin-
para suprimir la TSVP con com- son-White.
(f) Amp. 5 mg / 2 ml Alternativa: bolo 5 mg cada plejo QRS angosto y PA adecua- • Precaución en pacientes que
5 minutos hasta 30 mg. da con función VI preservada. reciben beta bloqueadores
• En algunos casos para disminuir orales.
la respuesta ventricular en la • La administración IV concomi-
fibrilación o flutter auricular. tante con betabloqueadores IV
• Vasodilatación directa con dismi- puede producir hipotensión
nución de la resistencia perifé- grave.
rica total y la presión arterial. • El calcio IV es un antagonista
• Inotropismo, cronotropismo y que puede restablecer la PA en
dromotropismo negativos. caso de toxicidad.

448
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

INOTRÓPICOS: los inotrópicos mejoran la vasoconstrictores (noradrenalina) y otros pue-


contractilidad miocárdica y tienen efectos so- den mostrar ambos efectos dependiendo de
bre los vasos periféricos. Algunos son la dosis (dopamina, adrenalina).
vasodilatadores (amrinone, dobutamina), otros

TABLA 3. INOTRÓPICOS

MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/


PRECAUCIONES

BETAMETILDIGOXINA 0,6-0,8 mg distribuidos en • Efecto directo con aumento de la • Su larga vida media y el estre-
Lanitop® 3-4 dosis en 24 horas. Las contratilidad miocárdica, del pe- cho margen terapéutico, limitan
Amp. 0,2 mg/ 2 ml(a) dos dosis iniciales se ad- riodo refractario nodal y de la re- su uso.
ministran en un lapso de 2 sistencia periférica total. • En IAM con disfunción sistólica
horas. • Indicaciones: fibrilación y flutter aguda, puede generar arritmias
auricular para disminuir la res- y aumentar el tamaño del
puesta ventricular. En taquicardia infarto.
supraventricular como una alter-
nativa al verapamilo. Insuficien-
cia cardíaca con fibrilación auri-
cular rápida, galope por S3 y
cardiomegalia severa. No se usa
en los estados agudos de
disfunción sistólica, puesto que
su efecto inotrópico es modesto.

(b) ADRENALINA Paro cardiaco • Paro cardiaco: FV, TV, asistolia, • El aumento de la presión arterial
Amp. 1 mg / 1 ml Dosis IV: 1 mg cada 3-5 actividad eléctrica sin pulso. y la frecuencia cardiaca puede
minutos durante la resuci- • Bradicardia sintomática: después causar isquemia miocárdica,
tación, seguida cada dosis de administración de atropina, angina y aumento de los reque-
de 20 ml de solución intra- dopamina y marcapasos transcu- rimientos de oxígeno.
venosa. táneo. • Dosis altas no mejoran la super-
Dosis alta: > 0,2 mg/kg si • Hipotensión severa. vivencia o el resultado neuroló-
una dosis de 1 mg fracasa. • Anafilaxia, asociada con la admi- gico y puede contribuir a la dis-
Infusión continua: 90 ml de nistración de líquidos intrave- función miocárdica pos resu-
DAD o SSN + 10 ampollas nosos, conticosteroides y antihis- citación.
de adrenalina (100 mcg/ml) tamínicos. • Dosis altas para el tratamiento
y valorar la respuesta. de shock secundario a drogas
Tubo endotraqueal: 2,0-2,5 o tóxicos.
mg diluidos en 10 ml de • Tiene un inicio de acción rápi-
SSN. da y la vida media es de 2 a 3
minutos, por lo cual, se necesi-
Bradicardia o hipotensión ta administrar en infusión con-
severa: 2,0-10 mcg/min en tinua.
infusión (diluir 1 mg de adre- • Vigilar frecuencia cardiaca, rit-
nalina en 500 ml de SSN e mo cardiaco y cifras de tensión
infundir a 1-5 ml/min). arterial.

449
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 3. INOTRÓPICOS

MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/


PRECAUCIONES

• Proteger la mezcla de la luz.


• Administrar por vena central.
Utilizar la vía proximal del ac-
ceso venoso central y compro-
bar la permeabilidad de la vía
endovenosa. Se puede presen-
tar inflamación o necrosis en los
sitios de infiltración periférica. Si
ocurre infiltración, se debe con-
sultar a cirugía plástica inme-
diatamente.
• Realizar controles de glicemia,
puesto que produce hiperglice-
mia, acidosis metabólica y
acidosis láctica.
• El gasto urinario se debe cuan-
tificar en forma horaria, debido
a que puede presentarse
oliguria por disminución en la
perfusión renal.
• Si se presenta hipertensión sig-
nificativa o arritmias, se debe
disminuir o descontinuar la in-
fusión.
• Descontinuar lentamente (0,1
mcg/kg cada vez) y monitoreo
hemodinámico hasta lograr sus-
pender la administración.
• Valorar signos de
sobredosificación: piel fría, dia-
foresis, cianosis, taquipnea y
alteraciones del estado mental.

(c) AMRINONA Dosis inicial: 0,75 mg/kg en ICC refractaria a diuréticos, • Monitoreo hemodinámico.
Inocor® 10 a 15 minutos.Infusión: vasodilatadores e inotrópicos. • No mezclar con dextrosa u
Frasco-ampolla 5-15 mcg/kg/min ajustando otros fármacos.
100 mg / 20 ml la dosis hasta obtener el • Puede causar taquiarritmias,
efecto. hipotensión y trombocitopenia.
• Preparación: 80 ml de SSN + 1
ampolla de amrinona.
• Concentración: 1 mg/ml

(d) ATROPINA Actividad eléctrica sin pul- • Medicamento de primera elec- • Precaución en isquemia e hipo-
Ampolla de 1 mg / ml so: 1 mg en bolo; si la ción en bradicardia sinusal. xia del miocardio, puesto que
asistolia persiste repetir • Bloqueo AV nodal o asistolia aumenta la demanda de oxíge-
cada 3 a 5 minutos hasta ventricular. no.

450
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

TABLA 3. INOTRÓPICOS

MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/


PRECAUCIONES

una dosis máxima de 0,03- • Segunda elección (después de • Bradicardia por hipotermia.
0,04 mg/kg. adrenalina y vasopresina) en
asistolia y actividad eléctrica sin
Bradicardia: 0,5-1,0 mg IV pulso bradicárdica.
cada 3 a 5 minutos según
necesidad hasta una dosis
total de 0,04 mg/kg.

Tubo endotraqueal: 2-3 mg


diluidos en 10 ml de SSN.

(e) DOPAMINA Dosis dopaminérgica: 1-5 • A bajas concentraciones incre- • Náusea, vómito.
Amp. 200 mg / 4 ml mcg/kg/min menta la filtración glomerular, el • Taquicardia sinusal, taquiarrit-
Vial de 400 mg / 250 ml Dosis inotrópica: 5- 10 flujo renal y la excreción de sodio mias supra o ventriculares.
(1600 mcg/ml). mcg/kg/min al actuar sobre receptores • Aumento de la presión capilar
Dosis vasopresora: 10-20 dopaminérgicos. pulmonar, aumento del shunt
mcg/kg/min • A concentraciones moderadas, intrapulmonar, disminución de
actúa sobre los receptores beta la respuesta ventilatoria a la
1 adrenérgicos, produciendo hipoxemia e hipercapnia.
efecto inotrópico positivo. • Preparación: 248 ml de SSN o
• A dosis mayores a 10 mcg/kg/ DAD 5% + 2 ampollas de dopa-
minuto, aumenta la resistencia mina. Concentración: 1600
vascular sistémica (por estímu- mcg/ml
lo de los receptores alfa 1 y
adrenérgicos).
• Indicaciones: shock cardiogéni-
co, edema pulmonar con hipo-
tensión y estados de bajo gasto
cardiaco.

NORADRENALINA 0,5-1 mcg/min hasta 30 • Produce considerable elevación • Aumenta los requerimientos de
Levophed® mcg/min de la RVP. oxígeno por el miocardio.
Amp. 4 mg / 4 ml • El flujo renal esplácnico y hepá- • Puede causar arritmias; usar
tico disminuyen, sin embargo, el con precaución en pacientes
flujo coronario puede aumentar con isquemia y marcapasos.
por incremento de la presión de • Necrosis tisular por extrava-
perfusión. sación.
• Indicaciones: shock distributivo • Preparación: 96 ml de SSN o
y resistencia vascular baja. DAD % + 1 ampolla de noradre-
nalina. Concentración: 40 mcg/ml

DOBUTAMINA, Infusión IV: 2-20 mcg/kg/ • Actividad inotrópica positiva in- • Puede incrementar el shunt
Dobutrex® min y ajustar la dosis sin tensa, mínimo efecto vasocons- intrapulmonar.
Frasco-ampolla 250 mg aumento de la frecuencia trictor y cronotrópico. • Puede precipitar angina en pa-
/ 20 ml(f) cardiaca > 10% de la basal. • Vasodilatador potente, con la cientes con enfermedad coro-
(12,5 mg/ml). consecuente disminución en la naria.

451
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 3. INOTRÓPICOS

MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/


PRECAUCIONES

presión telediastólica ventricular • Preparación: 105 ml SSN o


izquierda. DAD5% + 1 ampolla de dobuta-
• Indicaciones: shock cardiogénico mina. Concentración: 2000
y edema pulmonar (se asocia mcg/ml.
con dopamina).

ISOPROTERENOL • Infusión IV 2-10 mcg/min; • Produce marcado aumento de la • Taquiarritmias con gran au-
Amp. 1 mg / 1 ml(g) ajustar de acuerdo con frecuencia cardiaca. mento en el consumo de oxí-
frecuencia cardiaca. • Disminuye la resistencia vascular geno por parte del miocardio.
• En torsades de Pointes sistémica y pulmonar. • No usar en paro cardiaco.
ajustar para incrementar • Mejora la contractilidad miocár- • No usar con adrenalina, puede
la frecuencia cardiaca dica. causar FV / TV.
hasta que la TV sea su- • Indicaciones: manejo transitorio • No administrar a pacientes con
primida. de bradiarritmias severas, mien- shock inducido por drogas o in-
tras se implanta un marcapasos. toxicación (excepto intoxica-
ción por bloqueadores beta
adrenérgicos).
• Preparación: 250 ml de SSN +
1 ampolla de isoproterenol.
• Concentración: 4 mcg/ml.

TABLA 4. TROMBOLÍTICOS
MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
ESTREPTOKINASA 1.500.000 UI diluidas en Produce un cambio estructural en • Hemorragia a cualquier nivel.
Streptase® 100 ml de SSN. Infundir en el plasminógeno para formar La incidencia de hemorragia ce-
Amp. X 750.000 UI y un periodo de 60 minutos. plasmina; esta última lisa la fibrina rebral es de 0,4%.
1.500.000 en los trombos. La vida media es • Reacciones alérgicas: son
UI (liofilizado). (a) de 80-90 minutos. infrecuentes y, por lo general,
no severas (incidencia 3,6%)
Indicaciones: • Hipotensión arterial transitoria
• Se utiliza por vía periférica o (incidencia 11%).
intracoronaria para lisar el
trombo intracoronario en infarto
agudo del miocardio.
• Tromboembolismo pulmonar.
• Disfunción aguda de prótesis
valvular mecánica.
• Trombosis venosa profunda
proximal y oclusión arterial
embólica.

452
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

TABLA 4. TROMBOLÍTICOS
MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
ACTIVADOR TISULAR IAM Indicaciones: • Su vida media es de 1-3 minu-
DEL PLASMINÓGENO Infusión acelerada (1,5 • Las mismas que para la estrepto- tos. Por lo anterior se recomien-
rT-PA horas): administrar 15 mg kinasa. da la infusión intravenosa con-
Activase® en bolo; luego 0,75 mg/kg • Es el único agente fibrinolítico tinua de heparina.
Vial / 50 mg liofilizado en los siguientes 30 minu- aprobado para isquemia cerebral • Similares a la estreptokinasa,
para reconstruir con 50 tos (no exceder de 50 Mg) aguda. aunque, no causa reacciones
ml de agua destilada. y 0,5 mg/kg en los siguien- alérgicas ni hipotensión.
tes 60 minutos (no exce-
der de 35 mg).
Infusión en 3 horas: 60 mg
en la primera hora (bolo
inicial de 6-10 mg) y conti-
nuar la administración de
20 mg/h durante las dos
horas siguientes.
Accidente isquémico agudo
0,9 m,g/kg (máximo 90
mg); 10% de la dosis total
en bolo IV en un 1 minuto
y la dosis restante (90%) en
los siguientes 60 minutos.

TABLA 5. VASODILATADORES
MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
NITROPRUSIATO DE Iniciar con dosis de 0,1 Potente relajación arterial y ve- • Hipotensión arterial por dosis
SODIO mcg/kg/min. En general no nosa. Mejora la eyección ventri- inadecuadas.
Amp. 50 mg / 2 ml es prudente usar dosis cular y el gasto cardiaco. El inicio • Riesgo de intoxicación por
mayores de 5 mcg/kg/min. y suspensión de la acción son in- tiocianatos.
La dosis se ajusta 0,25 mediatos (1-2 minutos). • Retención de CO2
NITROGLICERINAFrasco mcg cada 5 minutos hasta • Las manifestaciones más fre-
50 mg / 250 ml (1 ml= obtener la respuesta de- Indicaciones cuentes de toxicidad son: des-
250 mcg). seada. • Crisis hipertensiva. orientación, agitación, letargia,
• Disfunción ventricular sistólica tinitus, miosis, arreflexia, con-
Infusión IV 0,25-4,0 mcg/ izquierda severa, generalmente vulsiones, coma e incluso muer-
kg/min asociado con inotrópicos. te cerebral, taquicardia,
• Disminuir la poscarga en la insu- hipertensión seguida de
ficiencia mitral o aórtica aguda. hipotensión, shock y arritmias
cardiacas.
• Antianginoso incial en dolor sos- • Preparación: 250 ml de DAD
pechoso de isqquemia.· 5% + 1 ampolla de nitroprusiato.
Manejo en las primeras 24-48 Concentración: 200 mcg/ml·
horas de IAM e ICC, infarto de Vigilar cifras de tensión arterial.

453
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 5. VASODILATADORES
MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
cara anterior extenso, isquemia • Proteger la mezcla de la luz y
persistente o recurrente o usar equipo de infusión opaco.
hipertensión. • Administrar con bomba de in-
• Después de 48 horas en pacien- fusión.
tes con angina recurrente o con- • En IAM evitar un descenso de
gestión pulmonar persistente la presión arterial sistólica >
• Urgencia hipertensiva. 10% en el paciente normoten-
so, 30% en el paciente hiper-
tenso y evitar descenso por
debajo de 90 mm Hg.
• No mezclar con otros medica-
mentos.
• Contraindicada en hipotensión,
bradicardia o taquicardia seve-
ra e infarto del VD.
• Vigilar cifras de tensión arterial.
• Vigilar presencia de cefalea, e
informar.
• Preparar la dilución en frasco
de vidrio y usar equipo de infu-
sión opaco.

TABLA 6. ELECTROLITOS
MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
CLORURO DE CALCIO • Bolo IV lento 8-16 mg/kg • Hipercalcemia documentada o • No mezclar con bicarbonato de
Frasco-ampolla de solu- (generalmente 5-10 ml) posible (por ejemplo insuficien- calcio.
ción al 10 % de 10 ml IV para hipercalemia y cia renal). • No emplear de rutina en paro
(100 mg / ml ). sobredosis de bloquea- • Hipocalcemia (por ejemplo des- cardiaco.
dores de canales del cal- pués de politraumatismos).
cio. Repetir según nece- • Antídoto contra efectos tóxicos
BICARBONATO DE sidad. (hipotensión y arritmias) por
SODIO • 2-4 mg/kg (generalmen- sobredosis de bloqueadores de
Ampolla de 10 mEq / 10 te 2 ml) IV para trata- canales de calcio o bloqueado-
ml (1 mEq/ml). miento profiláctico antes res beta adrenérgicos.
de bloqueantes de los • Profilaxis antes de bloqueadores
canales de calcio IV de calcio IV para prevenir
hipotensión.

Infusión IV: 1 mEq/kg en • Hipercalemia previa conocida. • No emplear de rutina en paro


bolo IV. Repetir la mitad de • Acidosis que responde al bicar- cardiaco.
la dosis cada 10 minutos. bonato (cetoacidosis diabética9. • Emplear análisis de gases en
sangre arterial si es posible,
para orientar el tratamiento.

454
CAPÍTULO IX: ADMINISTRACIÓN DE FÁRMACOS EN LA URGENCIA CARDIOVASCULAR

TABLA 6. ELECTROLITOS
MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
• Sobredosis de antidepresivos
tricíclicos, difenhidramina, co-
caína).
• Alcalinizar la orina en sobredosis
de aspirina.
• Reanimación prolongada con
ventilación efectiva.

SULFATO Paro cardiaco (por hipo- • Recomendado en paro cardiaco • Hipotensión secundaria a la ad-
DE MAGNESIO magnesemia o Torsades secundario a Torsades de ministración IV rápida.
Ampolla al 20% de Pointes): 1-2 g IV en Pointes o hipomagnesemia. • Precaución en pacientes con fa-
por 10 ml bolo. • FV refractaria después de lla renal.
lidocaina. • No se recomienda para la ad-
Torsades de Pointes (sin • Torsades de Pointes con pulso. ministración profiláctica en pa-
paro cardiaco): 1-2 g dilui- • Arritmias ventriculares con com- cientes hospitalizados por IAM.
dos en 50-100 ml de DAD promiso hemodinámica asocia- • La sobredosificación accidental
5% en un periodo de 5 a das con intoxicación por digitá- causa depresión respiratoria la
60 minutos IV; seguido de licos. cual se contrarresta con gluco-
0,5-1,0 g/h IV hasta lograr nato de calcio IV.
el efecto deseado.

IAM: 1-2 g IV diluidos en


50-100 ml de DAD 5% du-
rante 5 a 60 minutos, se-
guidos de 0,5-1,0 g/h du-
rante 24 horas.

TABLA 7. ANTICOAGULANTES Y ANTIPLAQUETARIOS


MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
HEPARINAL • Bolo inicial de 60 UI/kg • Tratamiento coadyuvante en el • Ajustar la dosis de acuerdo con
iquemine® (bolo máximo 4000 UI). IAM. PTT 1,5 a 2 veces el valor del
Frasco-ampolla • Infusión continua: 12 UI/ • Comenzar con fibrinolíticos. control durante 48 horas.
con 25000 UI/ 5 ml kg/h (máximo 1000 UI/h). • Control de PTT a las 6, 12, 18 y
(5000 UI/ml). 24 horas.
• Contraindicada en hemorragia
activa, cirugía intracraneal,
intramedular u ocular reciente,
hipertensión arterial severa, he-
morragia gastrointestinal.
• Revertir el efecto con protamina
IV 25 mg en 10 minutos (1 mg
de protamina por cada 100 UI
de heparina).

455
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 7. ANTICOAGULANTES Y ANTIPLAQUETARIOS


MEDICAMENTO DOSIS a. ACCIÓN / INDICACIÓN EFECTOS SECUNDARIOS/
PRECAUCIONES
HEPARINAS DE BAJO 1 mg/kg SC dos veces al • Inhiben la formación de trombina • Contraindicada en hemorragias.
PESO MOLECULAR día (Dalteparina y enoxa- por inhibición del factor Xa. • Precaución en pacientes con
parina) durante 2-8 días • Uso en síndrome coronario agu- trombocitopenia inducida por
DALTEPARINA adminsitrada con aspirina. do en pacientes con infarto no Q heparina.
(Fragmin®) o angina inestable. • Contraindicada en recuento
plaquetario < 100.000.
ENOXAPARINA • Contraindicada si hay antece-
(Clexane®) dente de alergia a la heparina.

NADROPARINA
(Fraxiparina®)

ASPIRINA 160 a 325 mg masticados • Bloquea la formación de trom- • Contraindicada en alergia a la


Comprimidos de 100 administrados lo antes po- boxano A2 que causa agragación aspirina.
y 325 mg sible y luego diariamente. plaquetaria y estenosis de las ar- • Contraindicación relativa en úl-
terias, lo cual reduce la mortali- cera activa o asma.
dad global por IAM, reinfarto y
ACV.
• Dolor torácico sugestivo de
isquemia.
• Síndrome coronario agudo, es-
pecialmente en pacientes candi-
datos para reperfusión.

LECTURAS RECOMENDADAS 8. Parra M. Planes de enfermería para pacientes en


postoperatorio de cirugía cardiaca. Facultad de
1. Hazinski MF, Cummins R, Field JM. Handbook of Enfermería, Universidad Nacional de Colombia.
emergency cardiovascular care. American Heart Bogotá, 1995.
Association. Dallas, 2000. 9. Pineda M, Matiz H. Uso de beta bloqueadores en
2. Canobio M. Trastornos Cardiovasculares. Edicio- el infarto agudo del miocardio. En: Enfermedad
nes Doyma y Times Mirror. Barcelona, 1993. coronaria: manejo práctico. Escuela Colombiana
3. Catalán E, Padilla F. Fármacos orales que no de- de Medicina. Colección Educación Médica Vol 14.
ben ser triturados. Enfermería Intensiva. 2001; Bogotá, 1994.
12:146-150. 10. Pineda M, Matiz H .Vasodilatadores en el infarto
4. Cuenca R. Interacciones farmacológicas. Farma- agudo del miocardio. En: Enfermedad coronaria:
cia Clínica 1997; 14:32-42. manejo práctico. Escuela Colombiana de Medicina.
5. Delgado O, Puigventós F. Administración de me- Colección Educación Médica Vol 14. Bogotá, 1994.
dicamentos por vía oral. Medicina clínica. 1997; 11. Rippe JM, Irwinn RS, Alpert JS, et al. Intensive
108: 426-435. Care Medicine. 2nd ed. Little Brown and Company.
6. Grupo de Enfermeras y Médicos. Manual de pro- Toronto, 1991.
tocolos de las unidades de cuidado intensivo. Fun- 12. Viñuales M, Sancerní P. ¿Cómo prevenir las
dación Cardio Infantil Instituto de Cardiología. interacciones fármaco alimentarias?. Revista Rol
Bogotá, 2002. de Enfermería 2001; 126:31-35.
7. Hurst JW. Manual del Corazón. Nueva Editorial 13. Vuelta M, Barroso E. Interacciones alimentos-me-
Interamericana. Bogotá, 1990. dicamentos. Enfermería Intensiva. 1997; 8: 54-58.

456
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

CAPÍTULO X

Insuficiencia cardiaca en el adulto

Mabel Gómez, MD
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a falla cardiaca es una enfermedad cróni-


ca, progresiva, caracterizada por múltiples
hospitalizaciones y altas tasas de mortalidad.
ciente externo se centran en mantener su es-
tabilidad. La educación del paciente y su fa-
milia, la promoción de la adherencia al trata-
miento y las órdenes de salida pueden contri-
Aunque en Colombia no se conocen estadís- buir a la estabilidad clínica y mejorar el pro-
ticas sobre la incidencia y prevalencia de la nóstico.
falla cardiaca, sabemos que la enfermedad
cardiovascular es la segunda causa de muer- La falla cardiaca es primariamente una enfer-
te en el país y que con el envejecimiento de la medad de ancianos. Aproximadamente entre
población será la primera causa de muerte en el 6% y el 10% de la población mayor de 65
el año 2005. Según la Organización Mundial años tiene falla cardiaca, y entre los hospitali-
de la Salud (OMS), se espera una epidemia zados por falla cardiaca, 80% son mayores
de enfermedad cardiovascular en los países de 65 años.
subdesarrollados.
Las diferentes sociedades científicas del mun-
Se ha estimado que 4,9 millones de norteame- do han creado una nueva clasificación de la
ricanos sufren falla cardiaca, y que se diag- falla cardiaca que enfatiza la evolución y pro-
nostican aproximadamente 400.000 casos gresión de la enfermedad, para iniciar el tra-
nuevos cada año. En 1995 se registraron tamiento desde las fases pre-sintomáticas,
872.000 hospitalizaciones por falla cardiaca y con lo cual se ha logrado el mayor costo-be-
1,8 millones de hospitalizaciones con segun- neficio.
do diagnóstico de esta entidad. De 1980 a
1993, el número de consultas por falla cardia- Actualmente se identifican cuatro estadios de
ca aumento en 71%. la falla cardiaca:

Los avances en el tratamiento y la interven- Estadio A: paciente con alto riesgo de falla
ción temprana para prevenir la descompen- cardiaca pero que no presenta alteración es-
sación pueden retardar la progresión de la tructural del corazón.
enfermedad y mejorar la supervivencia. Des-
pués de la evaluación inicial, exámenes diag- Estadio B: pacientes con alteraciones estruc-
nósticos e implementación del tratamiento turales del corazón pero que nunca ha pre-
estándar, las estrategias del manejo del pa- sentado síntomas de falla cardiaca.

457
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Estadio C: paciente con síntomas de falla El síndrome clínico puede ser el resultado de
cardiaca actuales o en el pasado, asociado a anormalidades en el pericardio, endocardio,
alteración estructural cardiaca subyacente. miocardio o grandes vasos, pero la mayoría
de los pacientes tiene disminución de la fun-
Estadio D: paciente en fase terminal de la ción ventricular izquierda.
enfermedad que requiere modalidades espe-
cializadas de tratamiento, como soporte circu- La falla cardiaca se asocia con un amplio ran-
latorio mecánico, infusión inotrópica continua, go de anormalidades de la función ventricular
transplante cardíaco o cuidado intrahos- izquierda que van desde disfunción diastólica
pitalario. predominante con fracción de eyección pre-
servada y cavidades ventriculares de tamaño
Los estadios C y D corresponden a lo que tra- normal, donde la alteración sobresaliente es
dicionalmente se clasificaba como falla car- restricción al llenado ventricular, hasta el pre-
diaca. Con esta nueva clasificación se reco- dominio de la disfunción sistólica con dilata-
nocen factores de riesgo establecidos y re- ción de las cavidades izquierdas y llenado
quisitos estructurales para el desarrollo de la ventricular preservado. Ambas anormalidades
falla cardiaca, lo cual permite intervenciones pueden coexistir en un mismo paciente con
terapéuticas antes de la aparición de los sín- diferentes grados de severidad.
tomas o de la disfunción ventricular que pue-
dan reducir la morbilidad y la mortalidad. Esta La causa principal de la falla cardiaca es la
clasificación complementa pero no reempla- enfermedad coronaria, presente en 70% de
za la clasificación funcional de la New York los casos; otras causas son hipertensión arte-
Heart Association, la cual mide la severidad rial, enfermedad tiroidea, enfermedad valvular,
de los síntomas en pacientes estadio C y D. cardiopatía congénita, abuso de alcohol, mio-
carditis, etc.; puede no tener causa conocida,
como en la cardiomiopatía dilatada idiopática.
LA FALLA CARDIACA
COMO UN SÍNDROME CLÍNICO No hay una prueba diagnóstica específica
para la falla cardiaca, y más bien el diagnósti-
DEFINICIÓN DE FALLA CARDIACA co clínico se establece con base en una his-
toria clínica cuidadosa y en el examen físico.
La falla cardiaca es un síndrome clínico com-
plejo, que puede ser desencadenado por cual-
quier desorden funcional o estructural del co- LA FALLA CARDIACA COMO
razón que comprometa la capacidad del co- UNA ALTERACIÓN SINTOMÁTICA
razón en el llenado ventricular o en la eyección
de sangre. La falla cardiaca se manifiesta pre- El método más útil de cuantificación del gra-
dominantemente de dos maneras: 1. disnea do de limitación funcional que impone la falla
y cansancio, con limitación de la tolerancia al cardiaca es el desarrollado por la New York
ejercicio, y 2. retención de líquidos que produ- Heart Association (NYHA). Tabla 1.
ce congestión pulmonar y edema periférico.

458
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

TABLA 1. CLASIFICACIÓN FUNCIONAL DE LA FALLA CARDIACA (NYHA)

Clasificación Hallazgos
Clase I: Asintomático No limitación durante la actividad ordinaria. No hay fatiga, disnea, palpitaciones o angina.
Clase II: Leve Leve limitación de la actividad físicaActividad física ordinaria produce fatiga, palpitaciones,
disnea o dolor anginoso
Clase III: Moderado Limitación marcada de la actividad física. Aunque el paciente esta asintomático en repo-
so, menos que la actividad normal le produce síntomas
Clase IV: Severo Incapacidad para cualquier actividad física sin molestias. Los síntomas pueden presentar-
se aun en reposo y con cualquier actividad empeoran.

LA FALLA CARDIACA COMO UNA ALTERA- La activación endógena de sistemas neurohor-


CIÓN PROGRESIVA monales juega un papel importante en la in-
ducción de la remodelación cardiaca y por lo
La disfunción ventricular izquierda se inicia tanto en la progresión de la falla cardiaca. Los
como una lesión o estrés del miocardio, y ge- pacientes con falla cardiaca exhiben niveles cir-
neralmente es un proceso paulatino, aun en culantes elevados de norepinefrina, angioten-
ausencia de una nueva lesión. La manifesta- sina II, aldosterona, endotelina, vasopresina y
ción principal de la progresión es un cambio citoquinas que afectan adversamente la estruc-
en la geometría del ventrículo izquierdo, tal tura y función del corazón. Los factores neu-
como hipertrofia y dilatación de la cámara, la rohormonales no solo aumentan el estrés he-
cual se vuelve más esférica; este proceso se modinámico sobre el ventrículo por su acción
denomina remodelación cardiaca. El cambio de retención de sodio y vasoconstricción peri-
en el tamaño de la cámara, que aumenta el férica, sino que también tienen un efecto tóxi-
estrés sobre la pared, deprime su desempe- co directo sobre las células cardíacas y esti-
ño mecánico y aumenta la regurgitación a tra- mulan la fibrosis miocárdica, lo cual altera más
vés de la válvula mitral, precede a los sínto- la arquitectura cardiaca y disminuye la función
mas, generalmente por meses o años, y con- ventricular izquierda (Figura No. 1). La evolu-
tinúa para contribuir a su empeoramiento, aun ción y progresión de la falla cardiaca se puede
después de iniciado el tratamiento. resumir en cuatro estadios. (Figura No. 2).

459
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FIGURA No. 1. FISIOPATOLOGÍA DE LA FALLA CARDIACA

Función ventricular deteriorada / Daño miocárdico


(Ej. Postinfarto del miocardio, cardiomiopatía dilatada)

Falla cardíaca

Disminución del volumen latido y del gasto cardíaco

Respuesta neurohormonal

Activación sistema simpático Sistema renina-angiotensina-aldosterona

• Vasoconstricción: incremento del tono simpático, angiotensina II, endotelinas,


alteración de la liberación de oxido nítrico.
• Retención de sodio y líquidos: incremento de vasopresina y aldosterona

Aumento de estrés sobre la pared ventricular y dilatación (remodelación) que


conduce a empeoramiento de la función ventricular

Mayor falla cardiaca

460
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

FIGURA 2. PROGRESIÓN Y EVOLUCIÓN DE LA FALLA CARDIACA

FALLA CARDIACA = ENFERMEDAD PROGRESIVA

Estado A Estado B Estado C Estado D


Alto riesgo de Alteración Alteración FC refractaria.
FC, sin estructural estructural Necesidad de
enfermedad cardiaca sin cardiaca con intervención
estructural y sin síntomas de FC síntomas especializada
síntomas de FC previos o
actuales de FC

HTA, EC, DM, IAM previo, FE Enfermedad Síntomas


drogas disminuida, estructural y severos a pesar
cardiotoxicas, enfermedad síntomas de tratamiento y
familiares CM valvular hospitalización

Daño en la estructura Falla cardiaca Tratamiento no


cardiaca: sintomática: efectivo
LESION CARDIACA DISNEA O EDEMA

FC= falla cardiaca, HTA= Hipertension arterial, EC= Enfermedad coronaria, IAM= infarto agudo de miocardio, FE= fracción de
eyección CM= cardiomiopatia dilatada
Modificado de ACC/AHA Guidelines for the Evaluation and Management of Chronic Heart Failure in the Adult. http://www.acc.org/
clinical/guidelines2001.

VALORACIÓN CLÍNICA diograma bidimensional con estudio doppler,


que permite valorar la función ventricular
EVALUACIÓN INICIAL sistólica/diastólica, el movimiento de las
paredes, la anatomía y función de las válvu-
1. Identificación de los pacientes las cardíacas, evaluar el pericardio y los
En general los pacientes con falla cardiaca grandes vasos. Otros exámenes importan-
consultan por una de las siguientes causas: tes son el electrocardiograma, la radiogra-
• Disminución de la tolerancia al ejercicio. fía de tórax, la tomografía axial computado-
• Retención de líquidos. rizada para valorar pericardio y tumores car-
• Sin síntomas o síntomas de otra enfer- díacos, la resonancia nuclear magnética
medad cardiaca o no cardiaca. cuando se sospecha infiltración miocárdica
2. Identificación de la anormalidad estructural o masas cardiacas. La medicina nuclear
El apoyo diagnóstico más útil para identificar permite valorar exactamente la función ven-
la causa de la falla cardiaca es el ecocar- tricular pero no las estructuras cardiacas.

461
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FIGURA 3. EVALUACIÓN INICIAL DE LOS PACIENTES CON FALLA CARDIACA

Identificación de Evaluación de la causa de la


Identificación de pacientes
anormalidad estructural disfunción ventricular

Disminución de Historia clínica, Historia clínica y


tolerancia al ejercicio examen físico, examen físico
ecocardiograma,
electrocardiograma,
Sin síntomas o con TAC, RMN, medicina Exámenes de
síntomas de otra nuclear laboratorio
enfermedad

Retención de Enfermedad
líquidos miocardica: biopsia

Búsqueda de
enfermedad coronaria

TAC= tomografia axial computadorizada, RMN= resonancia nuclear magnética


Modificado de ACC/AHA Guidelines for the Evaluation and Mangement of Chronic Heart Failure in the Adult. http://www.acc.org/
clinical/guidelines 2001

3. Evaluación de la causa de la disfunción antecedentes se deben interrogar hipertensión,


ventricular enfermedad coronaria, fiebre reumática, irra-
Identificar la causa de la disfunción es muy diación torácica, abuso de drogas ilícitas y al-
importante, puesto que algunas condicio- cohol, exposición a cardiotóxicos, exposición
nes que producen disfunción ventricular a enfermedades transmitidas sexualmente, en-
izquierda pueden ser reversibles o trata- fermedades del colágeno, enfermedades del
bles; además, en el estudio, al identificar tiroides, infecciones bacterianas o infestación
la etiología, se pueden detectar condicio- por parásitos, historia familiar detallada y pre-
nes coexistentes que contribuyen o exa- sencia de factores de riesgo coronarios. En el
cerban la severidad de los síntomas. examen físico se deben buscar signos de falla
derecha o izquierda, con especial atención a
La evaluación de las causas se debe iniciar con la presencia de tercer ruido o ingurgitación pul-
la historia clínica y el examen físico. Entre los monar, las cuales tienen significado pronóstico.

462
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

Hallazgos Comentarios Otros


Historia
No importantes Muchos pacientes con disfunción severa Entrevistar a los cuidadores
del ventrículo izquierdo no informan sín-
tomas
Disnea con ejercicio Típicamente el primer síntoma Descartar: enfermedad pulmonar, obesidad,
desacondicionamiento, sobrecarga hídrica por
síndrome nefrótico, ansiedad, isquemia cardia-
ca transitoria.
Ortopnea Unida a disnea de ejercicio progresiva y Más específica que la disnea, pero sensibilidad
disnea paroxística nocturna es altamente baja y de poco valor predictivo
específica
Disnea paroxística Resulta de un aumento en la presión de Menos sensible pero más específica que la
nocturna llenado del ventrículo izquierdo por redis- disnea.
tribución de fluidos en posición supina.
Edema de miembros Acompañado de imposibilidad de usar El edema puede estar sobreimpuesto a la
inferiores zapatos caquexia cardiaca y pérdida de peso.
Disminución de tolerancia Causado por estado de bajo gasto Considerar anemia y otras alteraciones médicas
a ejercicio
Confusión o alteración Secundario a bajo gasto Puede relacionarse con cirrosis cardiaca, depre-
del estado mental en sión, disminución de perfusión cerebral, sobre-
ancianos medicación
Síntomas abdominales La caquexia cardiaca puede asociarse Enfermedad hepática, anorexia cardiaca.
asociados con ascitis o a enteropatía perdedora de proteínas
hepatomegalia
Examen Físico
Reflujo hepatoyugular Indica falla cardiaca derecha. Maniobra de Valsalva durante el examen da
positivo falsos positivos.
Tercer Ruido Hallazgo más específico Sensibilidad 24%, especificidad 99%
Hipertrofia ventricular, cuarto ruido
Soplos pueden ayudar al diagnóstico
Ápex desplazado Menos del 50% de pacientes con ic Sensibilidad 66%
Estertores Pulmonares Sin enfermedad pulmonar, sugestivos de ic Las sibilancias se diagnostican erróneamente
como asma.
Edema periférico no Puede estar asociado a dermatitis por Descartar: insuficiencia venosa, obstrucción
debido a insuficiencia estasis. linfática, tvp, hipoalbuminemia, efecto de calcio
venosa antagonista.

463
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La primera evaluación de un paciente con fa- causa más frecuente de falla cardiaca sistó-
lla cardiaca debe incluir hemograma, examen lica, puede ser útil definir la presencia, las
de orina, prueba para enfermedad de Chagas, características anatómicas y el significado fun-
electrolitos, lípidos, pruebas de función renal cional de la enfermedad coronaria. Se deben
y hepática, radiografía de tórax, electrocardio- practicar estudios no invasores o invasores,
grama y pruebas de función tiroidea. Según dependiendo de las características de cada
los hallazgos clínicos, pueden ser útiles la ferri- paciente.
tina, HIV, pruebas para enfermedades del te-
jido conectivo y resonancia nuclear magnéti- Las recomendaciones actuales de la ACC/
ca cuando se sospecha infiltración miocárdica. AHA para la evaluación de pacientes con fa-
Debido a que la enfermedad coronaria es la lla cardiaca aparecen en la tabla 3.

RECOMENDACIONES ACTUALES PARA LA EVALUACIÓN DE PACIENTES CON FALLA CARDIACA

Clase I • Identificar los problemas cardiacos y no cardiacos que podrían desencadenar o acelerar la progresión de la falla
cardiaca por medio de la historia clínica y el examen físico.
• Valoración inicial y periódica de la clase funcional del paciente.
• Valoración inicial y periódica del estado de volumen inicial.
• Inicial: Cuadro hemático completo, examen de orina, electrolitos, creatinina, NUS, pruebas de función hepática,
TSH.
• Monitoria seriada de electrolitos y creatinina.
• ECG y Rx de tórax iniciales.
• Ecocardiograma bidimensional con Doppler en la valoración inicial.
• Cateterismo en pacientes con angina que son candidatos a revascularización.
Clase IIa • Cateterismo cardiaco con coronariografía en pacientes con dolor torácico quienes no tienen evaluación de su
anatomía coronaria y no tienen contraindicaciones para revascularización miocárdica.
• Cateterismo cardiaco con coronariografía en pacientes con enfermedad coronaria conocida o sospechada, sin
angina, que son candidatos para revascularizar.
• Prueba de ejercicio máxima con medición de intercambio respiratorio y/o saturación de oxígeno sanguínea para
ayudar a determinar si la falla cardiaca es la causa de la limitación de la clase funcional cuando la contribución de
la falla es incierta o para identificar candidatos a transplante cardíaco u otros tratamientos avanzados.
• Ecocardiograma en familiares de primer grado de pacientes con cardiomiopatía idiopática dilatada.
• Medir la fracción de eyección en pacientes con cambios en su estado clínico o quienes presentaron un evento
clínico o recibieron tratamientos que pueden cambiar la función ventricular.
• Tamizaje para hemocromatosis.
• Medición de anticuerpos antinucleares, factor reumatoideo, ácido vanilmandélico o metanefrinas en pacientes
seleccionados.
Clase IIb • Estudios no invasores para definir la probabilidad de enfermedad coronaria en pacientes con disfunción ventricular
izquierda.
• Prueba de esfuerzo máxima para facilitar la prescripción de ejercicio.
• Biopsia endomiocárdica en pacientes a quienes se les sospeche una enfermedad inflamatoria o infiltrativa cardiaca.
• Valoración del estado de HIV.
Clase III • Biopsia endomiocárdica en la evaluación de rutina de los pacientes con falla cardiaca.
• Monitoría de Holter o electrocardiografía de señal promediada.
• Coronariografía repetida o exámenes no invasores para isquemia en pacientes a quienes se les ha excluido
anteriormente enfermedad coronaria como causa de la disfunción ventricular izquierda.
• Medición rutinaria de niveles de norepinefrina o endotelina.

464
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

TRATAMIENTO dad de falla cardiaca. El control de los fac-


tores de riesgo de la aterosclerosis, disli-
PACIENTES EN ESTADIO A: ALTO RIESGO DE pidemia, tabaquismo, diabetes y obesidad,
DESARROLLAR DISFUNCIÓN VENTRICULAR disminuyen la posibilidad de eventos
IZQUIERDA cardiovasculares y por lo tanto de falla
cardiaca.
Control de Riesgo
4. Obesidad. Se ha demostrado claramente
Diferentes hábitos y condiciones aumentan el la relación entre la falla cardiaca y la obe-
riesgo de falla cardiaca: sidad.

1. Hipertensión arterial, que aumenta el ries- 5. Control de condiciones que pueden causar
go relativo de falla cardiaca a 4 y 3, en hom- lesión miocárdica. Los pacientes deben ser
bres y mujeres, respectivamente. Su con- advertidos de las consecuencias adversas
trol disminuye el riesgo de cualquier even- del uso del tabaco, cocaína, abuso del alco-
to cardiovascular aproximadamente en hol y otras drogas ilícitas. Varias interven-
26%. Las cifras de presión arterial óptima ciones usadas en el tratamiento del cán-
son presión arterial sistólica <120 y dias- cer son cardiotóxicas, las antraciclinas, la
tólica <80 mmHg. radioterapia y el tratuzumab.

2. Diabetes mellitus. Aumenta marcadamente 6. No se ha demostrado que el ejercicio, la


la probabilidad de falla cardiaca en pacien- restricción de sal o los suplementos nutri-
tes sin enfermedad estructural y afecta cionales disminuyan el riesgo de falla
adversamente los resultados en pacientes cardiaca.
con falla cardiaca establecida. El tratamien-
to con inhibidores de la enzima convertidora Detección temprana de disfunción ventricular
de la angiotensina disminuye el riesgo de No hay indicación para realizar estudios no
enfermedad renal y el tratamiento prolon- invasores para detectar disfunción ventricular
gado con ramipril (IECA) disminuye la pro- en pacientes con alto riesgo, excepto la eva-
babilidad de muerte cardiovascular, infarto luación ecocardiográfica de pacientes asinto-
del miocardio y falla cardiaca. máticos pero con muy alto riesgo de cardio-
miopatía, como aquellos sometidos a cardiotó-
3. Enfermedad aterosclerótica (central, coro- xicos o con historia familiar fuerte de cardio-
naria o periférica). Aumenta la probabili- miopatía.

465
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RECOMENDACIONES EN ESTADIO A – ALTO RIESGO DE FALLA CARDIACA

Clase I • Control de la hipertensión sistólica y diastólica de acuerdo a las guías de tratamiento (Nivel A de evidencia).
• Tratamiento de las dislipidemias, de acuerdo con las guías (Nivel B de evidencia).
• Evitar hábitos y comportamientos que pueden incrementar el riesgo de falla cardíaca (tabaquismo, consumo de
alcohol y uso de drogas ilícitas) (Nivel C de evidencia).
• Inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina en pacientes con enfermedad aterosclerótica, diabetes
mellitus e hipertensión arterial asociada a factores de riesgo cardiovascular (Nivel B de evidencia).
• Control de la frecuencia cardiaca en pacientes con taquiarritmias supraventriculares (Nivel C de evidencia).
• Evaluación periódica de signos y síntomas de falla cardiaca (Nivel C de evidencia).
Clase IIa • Evaluación no invasora de la función ventricular izquierda en pacientes con fuerte historia familiar de cardiomiopatía
o en aquellos sometidos a intervenciones cardiotóxicos (Nivel C de evidencia).
Clase III • Ejercicio para prevenir el desarrollo de falla cardiaca (Nivel C de evidencia).
• Reducción de sal en la dieta más allá de lo prudente en individuos saludables sin hipertensión o retención de
líquidos (Nivel C de evidencia).
• Exámenes rutinarios para detectar disfunción ventricular izquierda en pacientes sin signos o síntomas de falla
cardiaca o evidencia de enfermedad cardiaca estructural (Nivel C de evidencia).
• Uso rutinario de suplementos nutricionales para prevenir la aparición de falla cardiaca (Nivel C de evidencia).

ESTADIO B: PACIENTES estáa indicado el tratamiento crónico con


IECA. Aunque no hay estudios controlados,
CON DISFUNCIÓN VENTRICULAR el uso de ß-bloqueadores también está in-
IZQUIERDA SIN SÍNTOMAS dicado. Cuando la cardiopatía está asocia-
da con una taquiarritmia supraventricular,
PREVENCIÓN DE EVENTOS CARDIOVASCULARES debe buscarse el control de la frecuencia
cardíaca y del ritmo.
1. En pacientes con infarto agudo del mio- 4. Los pacientes con estenosis o regurgitación
cardio durante la fase aguda, la reperfusión mitral o aórtica severa deben ser conside-
temprana con trombolíticos o mediante an- rados para reemplazo valvular sin impor-
gioplastia disminuye el riesgo de falla car- tar la fracción de eyección. Aquellos con
díaca. También se benefician de la admi- regurgitación severa y que no son candi-
nistración de aspirina, ß-bloqueadores e datos para cirugía pueden ser considera-
inhibidores de la enzima convertidora de dos para tratamiento a largo plazo con un
la angiotensina (IECA). vasodilatador sistémico.
2. Los pacientes con antecedentes de infarto
del miocardio pero con función ventricular DETECCIÓN TEMPRANA FALLA CARDIACA
izquierda conservada deben recibir trata-
miento intensivo para el control de la dislipi- Como la aparición de los síntomas es progre-
demia e hipertensión, y también aspirina, siva, su detección puede ser difícil y se debe
ß-bloqueadores e IECA. instruir al paciente en cuanto a notificar cual-
3. En pacientes con disfunción sistólica ventri- quier cambio en su capacidad de ejercicio o
cular izquierda crónica pero asintomáticos cansancio de nueva aparición.

466
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

RECOMENDACIONES. ESTADIO B

Clase I • IECA en pacientes con infarto del miocardio reciente o antiguo sin importar la fracción de eyección (Nivel A de
evidencia).
• IECA en pacientes con disminución de la fracción de eyección, sin importar si el paciente tiene infarto del miocardio
previo o no (Nivel B de evidencia)
• Betabloqueador en pacientes con infarto del miocardio reciente, sin importar la facción de eyección (Nivel A de
evidencia).
• Betabloqueador en pacientes con disminución de la fracción de eyección, sin importar si el paciente tiene infarto
del miocardio previo o no (Nivel B de evidencia)
• Reemplazo o reconstrucción valvular en pacientes con estenosis o regurgitación valvular hemodinámicamente
significativas (Nivel B de evidencia).
• Evaluación regular de signos y síntomas de falla cardiaca (Nivel C de evidencia)
• Medidas listadas como recomendaciones clase I en pacientes en estadio A.
Clase IIb • Tratamiento a largo tiempo con vasodilatadores sistémicos en pacientes con regurgitación aórtica severa (Nivel B
de evidencia).
Clase III • Tratamiento con digoxina en pacientes con disfunción ventricular quienes están en ritmo sinusal (Nivel evidencia C).
• Reducción de la ingesta de sal por debajo de la cual es prudente para individuos saludables sin hipertensión o
retención de líquidos (Nivel evidencia C).
• Ejercicio para prevenir el desarrollo de falla cardíaca (Nivel de evidencia C).
• Uso rutinario de suplementos nutricionales para tratar la enfermedad cardiaca estructural o prevenir el desarrollo
de síntomas de falla cardiaca (Nivel evidencia C).

ESTADIO C: PACIENTES CON micos por su efecto cardiodepresor y proarrít-


DISFUNCIÓN VENTRICULAR mico, calcio-antagonistas que empeoran la
IZQUIERDA Y SÍNTOMAS falla cardiaca y antinflamatorios no esteroideos
ACTUALES O PREVIOS que pueden causar retención hídrica y vaso-
constricción periférica. El potasio debe moni-
MEDIDAS GENERALES torizarse estrictamente para mantener sus ni-
veles entre 3,8 a 5,2 mmol por litro.
Las medidas recomendadas en los estadios
A y B también están indicadas en estos pa- La principal causa de descompensación de la
cientes. Además, la restricción moderada de falla cardiaca y la necesidad de múltiples
sodio, ingesta diaria de líquidos entre 1,2 a hospitalizaciones es la adherencia imperfec-
1,5 litros y la determinación diaria del peso ta de los pacientes al tratamiento, lo cual ge-
son necesarios para el uso efectivo de diuréti- neralmente refleja un pobre entendimiento de
cos. Los pacientes deben ser vacunados con- su enfermedad. Por ello se han desarrollado
tra la influenza y el neumococo. Esta indica- “Clínicas de Falla Cardiaca” para el manejo
do realizar ejercicio aeróbico, como caminar integral del paciente con supervisión y educa-
20 minutos, dos o tres veces por semana para ción al paciente, cuya intervención prolonga
evitar el desacondicionamiento. el tiempo entre las hospitalizaciones, disminu-
ye la estancia hospitalaria y mejora la satis-
Evitar tres tipos de medicamentos que pue- facción del paciente, con lo cual se logra una
den descompensar la falla cardiaca: antiarrít- mayor adherencias a las terapias prescritas.

467
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MEDICAMENTOS RECOMENDADOS DE USO traindicaciones son broncoespasmo, bradi-


RUTINARIO cardia significativa o bloqueo cardíaco
avanzado, enfermedad arterial periférica.
La mayoría de los pacientes con falla cardiaca El betabloqueador debe ser iniciado a muy
crónica deben ser rutinariamente manejados baja dosis, seguida por incrementos gra-
con cuatro clases de medicamentos: un diuré- duales si las dosis bajas son toleradas,
tico, un ß-bloqueador, un calcio antagonista y usualmente cada dos semanas.
digital. 4. Digitálicos: la digoxina por uno a tres me-
ses puede mejorar los síntomas, la calidad
1. Diuréticos: los diuréticos incrementan la de vida y la clase funcional en pacientes
excreción de sodio urinario, disminuyen la con falla cardiaca cuando se usa con diu-
retención de líquidos, la presión venosa yu- réticos, IECA y ß-bloqueadores. La digoxi-
gular, la congestión pulmonar, el edema na no esta indicada como tratamiento pri-
periférico y el peso corporal. A plazo inter- mario para la estabilización de pacientes
medio, han demostrado mejorar la función con falla cardiaca descompensada aguda,
cardiaca, los síntomas y la tolerancia al y tampoco en pacientes que tienen enfer-
ejercicio en pacientes con falla cardiaca. medad sinusal o bloqueo auriculoventri-
El diurético de asa más comúnmente usa- cular significativos, a menos de tratamien-
do es la furosemida; en pacientes ambula- to con marcapasos. Se debe usar con cau-
torios se inicia con bajas dosis y se incre- tela en pacientes con otras medicaciones
menta lentamente hasta lograr el efecto que afectan el nodo sinusal.
deseado (diuresis y disminución de peso).
Una vez la retención de líquidos se resuel- INTERVENCIONES ÚTILES EN PACIENTES
va, el tratamiento debe ser mantenido para SELECCIONADOS
prevenir la recurrencia de la sobrecarga de
volumen. La dosis debe ajustarse de acuer- 1. Antagonistas de aldosterona: pacientes en
do al peso y los síntomas del paciente. clase funcional III/IV, con fracción de eyec-
2. Inhibidores de la enzima convertidora de ción <35%, función renal normal y niveles
la angiotensina. Los IECAs mejoran los sín- normales de potasio, se benefician con el
tomas, el estado clínico y la calidad de vida uso de la espironolactona.
en los pacientes con falla cardiaca. La fun- 2. Bloqueadores de los receptores de la an-
ción renal y el potasio sérico debe monito- giotensina: los BRA no deben ser conside-
rizarse inicialmente semanalmente. rados equivalentes o superiores a los
3. ß-bloqueadores: los ß-bloqueadores con IECAs en el tratamiento de la falla cardiaca
beneficios demostrados pertenecen a la y, por lo tanto, no deben se usados para el
segunda generación (metoprolol y biso- tratamiento de FC en pacientes que no han
prolol), así como a la tercera (carvedilol), y recibido IECAs o en aquellos que toleren
deben ser prescritos en todos los pacien- los IECAs. Los pacientes que no toleren
tes con falla cardiaca estable y que no ten- los inhibidores de la angiotensina por sus
gan contraindicación para su uso. Se con- efectos secundarios pueden recibir blo-
sideran estables aquellos que no están en queadores de los receptores de la angio-
una unidad de cuidado intensivo, que no tensina. En el momento el valsartan esta
tienen retención o depleción de líquidos y aprobado por la FDA para este uso.
que no han requerido recientemente trata- 3. Hidralazina y dinitrato de isosorbide: su
miento con inotrópicos intravenosos. Con- combinación no debe ser usado en el

468
CAPÍTULO X: INSUFICIENCIA CARDIACA EN EL ADULTO

tratamiento de la FC en pacientes que no 4. Rehabilitación física: el entrenamiento físi-


han recibido IECAs, y no deben sustituir a co puede disminuir los síntomas, incremen-
los IECAs en aquellos que los toleren. A tar la capacidad de ejercicio y mejorar la
pesar de la falta de evidencia, esta combi- calidad de vida en pacientes con falla car-
nación puede ser considerada en pacien- díaca. La mejoría es comparable a la que
tes con contraindicación de los IECAs, es- se logra con intervenciones farmacológicas
pecialmente en los que tienen falla renal o y es aditiva a los beneficios de IECAs y
hipotensión severa. beta bloqueadore, pero los efectos del ejer-
cicio a largo plazo no han sido completa-
mente definidos.

RECOMENDACIONES. ESTADIO C

Clase I • Diuréticos en pacientes quienes se tiene evidencia de retención de líquidos (Nivel A de evidencia).
• IECA a todos los pacientes excepto que este contraindicado (Nivel A de evidencia).
• Betabloqueador en todos los pacientes estables, a menos que este contraindicado (Nivel A de evidencia).
• Digitálicos para los síntomas de falla cardiaca, a menos que este contraindicado (Nivel A de evidencia).
• Evitar medicamentos que afecten adversamente el estado clínico de los pacientes como anti-inflamatorios no
esteroideos, la mayoría de los antiarrítmicos y la mayoría de los calcio antagonistas (Nivel B de evidencia).
• Medidas listadas como recomendaciones clase I en pacientes en estadio A y B.
Clase IIa • Espironolactona en pacientes con síntomas recientes o concurrentes de síntomas clase IV, función ventricular
preservada y concentración normal de potasio (Nivel B de evidencia.
• Ejercicio como un tratamiento adjunto para mejorar el estado clínico en pacientes ambulatorios (Nivel A de evi-
dencia).
• Bloqueador del receptor de la angiotensina en pacientes quienes están siendo tratados con digitales, diuréticos y
betabloqueadores, y no pueden recibir IECA por tos o angioedema (Nivel A de evidencia.
• Una combinación de hidralazina y nitratos en pacientes quieres están siendo tratados con digitales, diuréticos y
betabloqueadores, y no pueden recibir IECA por hipotensión o insuficiencia renal (Nivel B de evidencia).
Clase IIb • Agregar un bloqueador del receptor de la angiotensina a un IECA (Nivel B de evidencia).
• Agregar un nitrato (solo o en combinación con hidralazina) a un IECA en pacientes quienes están recibiendo
digitálicos, diuréticos y un betabloqueador (Nivel evidencia B).
Clase III • Uso intermitente por largo tiempo de una infusión de un medicamento inotrópico positivo (Nivel C de evidencia).
• Uso de un BRA en vez de un IECA en pacientes a quienes no se les haya dado previamente un IECA o puedan
tolerar los IECA (Nivel B de evidencia).
• Uso de un BRA antes que betabloqueador en pacientes con IECA y falla cardiaca (Nivel A de evidencia).
• Uso de calcio antagonistas como tratamiento de falla cardiaca (Nivel B de evidencia).
• Uso rutinario de suplementos nutricionales o terapia hormonal (Nivel C de evidencia).

ESTADIO D: PACIENTES CON FALLA mientos farmacológicos y no farmacológicos,


CARDIACA TERMINAL REFRACTARIA aunque algunos no mejoran o tienen recurren-
cias frecuentes. Estos pacientes, que tienen
La mayoría de los pacientes con falla cardiaca síntomas en reposo o mínimos esfuerzos y
secundaria a disfunción sistólica ventricular que típicamente requieren hospitalizaciones
izquierda responden favorablemente a trata- repetidas y prolongadas, deben ser conside-

469
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

rados para estrategias especiales de trata- co en centros especializados. Todas las reco-
miento, como soporte mecánico circulatorio, mendaciones listadas en los estadios A, B y
tratamiento con inotrópico intravenoso conti- C están indicadas en ellos.
nuo, manejo quirúrgico o transplante cardía-

INDICACIONES PARA TRASPLANTE CARDIACO


Indicaciones absolutas
• Por compromiso hemodinámica de la falla cardiaca
• Shock cardiogénico refractario
• Dependencia de inotrópico IV para mantener perfusión orgánica adecuada
• VO2 pico menor de 10 ml por kg por minuto alcanzando metabolismo anaeróbico
• Síntomas severos de isquemia que limitan la actividad rutinaria y no puedan mejorarse por revascularización miocárdica
quirúrgica o percutánea.
• Arritmias ventriculares sintomáticas recurrentes refractarias a todas las modalidades terapéuticas.
Indicaciones Relativas
• VO2 11 a 14 ml por kg por min (o 55% de lo predicho) y limitaciones mayores de las actividades diarias del paciente.
• Isquemia recurrente refractaria, no candidato para ninguna otra intervención.
• Inestabilidad recurrente del balance de líquidos o función renal no secundaria a no adherencia del paciente al trata-
miento médico.

LECTURAS RECOMENDADAS 4. Garcia C. Papel de los inotrópicos en el manejo


de la falla cardiaca aguda. Rev Colomb Cardiol
1. Baker DW, Chin MH, Cinquegrani MP, et al. ACC/ 1995;4:179-180
AHA Guidelines for the Evaluation and Manage- 5. Remme WJ, Cleland JGF, Dargie H, et al.
ment of Chronic Heart Failure in the Adult: A report Guidelines on Heart Failure Treatment. The Task
of the American College of Cardiology/American Force of the Working Group on Heart Failure of
Heart Association Task Force on Practice Guide- the European Society of Cardiology. Eur Heart J
lines (Committee to Revise the 1995 Guidelines 1997; 18:736-753.
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Web site. http://www.acc.org/clinical/guidelines/ Statement for Healthcare Professionals From the
failure/hf_index.htm. Cardiovascular Nursing Council of the American
2. Baughman KL, Dec WG, Elkayam U, et al. Heart Heart Association. Circulation 2000; 102:2443-
Failure Society of America. Guidelines for Manage- 2456.
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Ventricular Systolic Dysfunction - Pharmacological
Approaches. J Card Fail 1999; 5:357-382. INTERNET
3. Cleland JGF, Erdmann E, Ferrari R, et al. Guide- 1. www.aha.org
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Failure. The Task Force of the Working Group on 3. www.escardio.org
Heart Failure of the European Society of Cardio- 4. www.sociedad española de cardiología
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470
CAPÍTULO XI: PERICARDITIS EN ADULTOS

CAPÍTULO XI

Pericarditis en adultos

Mabel Gómez, MD
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l pericardio es la envoltura serosa del co-


razón que se puede afectar por agentes
infecciosos, físicos, traumáticos, inflamatorios
neos. El pericardio visceral es la capa de cé-
lulas mesoteliales que está en contacto con
él, se adhiere firmemente al epicardio y hace
o, en forma secundaria, debido a procesos me- un repliegue en los grandes vasos. El pericar-
tabólicos o enfermedades generales. La pre- dio parietal es una capa fibrosa. Entre las dos
valencia de la pericarditis ha venido en aumen- capas existe un espacio virtual que contiene
to en los últimos años a causa del uso de he- pequeñas cantidades de líquido, aproximada-
modiálisis, terapia inmunosupresora, cirugía mente 15-35 ml de ultrafiltrado de sangre y
cardiovascular y a la mayor supervivencia de plasma. El pericardio tiene funciones muy im-
los pacientes con cáncer. El Síndrome de portantes, como limitar la distensión cardiaca,
Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA) se ha con- facilitar el acoplamiento e interacción de las
vertido en una causa importante de pericardi- cuatro cámaras del corazón, mantener la re-
tis. Debido a la complejidad etiopatológica el lación presión/volumen de las cámaras cardia-
manejo debe ser individualizado luego de una cas y mantener la geometría del ventrículo
cuidadosa evaluación. izquierdo, así como funciones inmunológicas,
vasomotoras y fibrinolíticas.

INTRODUCCIÓN
DIAGNÓSTICO
Las enfermedades del pericardio constituyen
una causa relativamente frecuente de consulta La pericarditis aguda es el síndrome clínico
en los servicios de urgencias y de ingreso a de inflamación del pericardio que se caracte-
los servicios de cardiología. El dolor de la peri- riza por:
carditis es un signo alarmante para el pacien-
te y constituye un reto diagnóstico para el mé- 1. Dolor torácico.
dico de urgencias. 2. Frote pericárdico.
3. Alteraciones electrocardiográficas evolutivas.

ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA El dolor torácico es la principal manifestación


de la pericarditis aguda. Generalmente se lo-
El pericardio es una membrana serosa forma- caliza en la región retroesternal y precordial
da por dos capas, la parietal y la visceral, y izquierda y se irradia hacia el cuello y trapecio
contiene nervios linfáticos y vasos sanguí- izquierdo. Ocasionalmente puede localizarse

471
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

en el epigastrio simulando un abdomen agudo, clínicamente son indistinguibles, y es proba-


o tener una característica opresiva con irradia- ble que muchas de las pericarditis idiopáticas
ción al brazo izquierdo similar al dolor de angi- sean causadas por infecciones virales, por lo
na o de infarto de miocardio. El dolor suele que es poco práctico realizar sistemáticamen-
aumentar en la posición supina, con la tos, te estudios para tratar de aislar o identificar
con la inspiración profunda o con la deglución, virus. El comienzo del cuadro clínico suele ser
y mejora en la posición sentado. En ocasiones agudo, con dolor torácico, frote y fiebre. Un
existe dolor pleurítico asociado por afección curso clínico autolimitado y la ausencia de de-
concomitante de la pleura. rrame son datos que apoyan fuertemente este
diagnóstico.
El frote pericárdico es el hallazgo patognomó-
nico de exploración física en la pericarditis Pericarditis tuberculosa. Se diagnostica por
aguda. Clásicamente se han descrito tres la identificación del bacilo de Koch o de granu-
componentes en el frote pericárdico, que se lomas caseificantes en el tejido o el líquido
relacionan con los movimientos cardiacos du- pericárdico, o en cualquier parte del organismo
rante la sístole auricular, la sístole ventricular en presencia de un cuadro de pericarditis. El
y el llenado ventricular rápido. Una caracte- hallazgo de actividad alta de la adenosindea-
rística típica del frote pericárdico es su evanes- minasa (ADA), >45 U/ml, en el líquido pleural
cencia y los cambios en sus características o pericárdico es muy sugestivo de esta infec-
auscultatorias entre una exploración y otra. ción, aunque no es patognomónico. Suele
ocasionar un cuadro de pericarditis prolonga-
Cuando el frote pericárdico tiene un solo com- do con síntomas constitucionales y mala res-
ponente, puede confundirse con un soplo sis- puesta al tratamiento antiinflamatorio. En la
tólico mitral o tricuspídeo. El análisis de los mayoría de los casos existe derrame pericár-
electrocardiogramas seriados es útil para dico, y aproximadamente en el 60% de los
confirmar el diagnóstico de pericarditis, como mismos se presenta taponamiento.
se describe en la sección de métodos diag-
nósticos. Pericarditis purulenta. Su diagnóstico se ba-
sa en la obtención de un exudado pericárdico
purulento, rico en polimorfonucleares. Suele
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS ocurrir por extensión de una infección bacte-
riana contigua -neumonía y empiema lo más
El diagnóstico de pericarditis aguda se puede común- y ocasionalmente por vía hemató-
hacer cuando existen por lo menos dos de los gena. El taponamiento cardiaco es muy
tres criterios (dolor torácico característico, frote frecuente.
pericárdico, cambios evolutivos de la repolari-
zación ventricular en el ECG), aunque la pre- Pericarditis urémica. La afección pericárdica
sencia de un frote pericárdico permite, por sí es muy frecuente en los pacientes con insufi-
solo, establecer el diagnóstico. ciencia renal avanzada. Se distinguen tres
subgrupos:
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS DE LAS FORMAS
ESPECÍFICAS DE PERICARDITIS 1. Pericarditis urémica: es la que afecta a
pacientes con insuficiencia renal grave
Pericarditis aguda idiopática o viral. Se (aguda o crónica), antes de iniciar la diálisis
agrupan en el mismo apartado, ya que o poco después de su inicio. Se presenta

472
CAPÍTULO XI: PERICARDITIS EN ADULTOS

en alrededor del 10% de los pacientes, aun- las más frecuentemente implicadas son el lu-
que hasta en el 20% de los enfermos pue- pus eritematoso sistémico, la artritis reuma-
den documentarse derrames pericárdicos toide y la esclerodermia. La afección pericár-
silentes. dica suele ocurrir en fases de actividad de la
2. Pericarditis asociada a diálisis: aparece enfermedad y en muchas ocasiones es
entre 3-5% pacientes/año y frecuentemente subclínica.
se asocia con diálisis insuficiente o con
sobrehidratación. Enfermedad pericárdica en pacientes con
3. Pericarditis en pacientes con trasplante SIDA. La patología pericárdica es la causa
renal: afecta a 2-3% de los pacientes tras- más frecuente de enfermedad cardiaca en el
plantados y frecuentemente se asocia con paciente con infección por VIH, con una inci-
rechazo. dencia de 21%, ligeramente mayor a la inci-
dencia de afección miocárdica (18%). La ma-
Pericarditis postinfarto. Ocurre en los prime- yoría de los casos son derrames pericárdicos
ros días tras el infarto y suele darse en el con- leves y asintomáticos. Se resuelven espontá-
texto de infartos transmurales extensos. Son neamente en casi 40% de los casos.
poco frecuentes las alteraciones electrocar-
diográficas típicas. Existe una forma tardía, el La afección pericárdica sintomática es rara
síndrome de Dressler, que es un cuadro de (aproximadamente 3% de los pacientes infec-
pericarditis aguda con síntomas floridos, a me- tados por el VIH). Es más frecuente en pa-
nudo acompañada de pleuritis y derrame pleu- cientes en fases avanzadas de la infección por
ral. Su etiología es probablemente autoinmune VIH y se presenta como pericarditis aguda o
y suele aparecer varias semanas o meses taponamiento cardiaco, este último en 30%
después del infarto. de los casos. Dos tercios se deben a infeccio-
nes o neoplasias, mientras que en el tercio
Pericarditis neoplásica. El diagnóstico se restante la causa permanece desconocida.
basa en la identificación de células malignas
en el líquido pericárdico, o de invasión neoplá-
sica del tejido pericárdico. Aunque existen neo- MÉTODOS DIAGNÓSTICOS
plasias pericárdicas primarias, en su gran ma-
yoría se trata de extensión de una enfermedad ELECTROCARDIOGRAMA
maligna de otra localización, siendo las más
frecuentes las neoplasias de pulmón, seno y Las alteraciones electrocardiográficas seria-
hematológicas. das son muy útiles para el diagnóstico de pe-
ricarditis. Los cambios en el electrocardiogra-
Pericarditis pospericardiotomía. Se trata de ma pueden ponerse de manifiesto a las pocas
un cuadro de pleuropericarditis aguda con fie- horas del comienzo del dolor torácico. Se han
bre, que ocurre pocas semanas después de descrito 4 estadios en la evolución del elec-
la cirugía cardiaca con apertura del pericardio. trocardiograma:
Se cree que es causado por una reacción
autoinmune a la manipulación del pericardio. 1. Estadio I: elevación del segmento ST de
tipo cóncavo de carácter difuso (excepto
Pericarditis por enfermedad autoinmune. aVR y V1). Las ondas T son generalmente
Aunque la pericarditis es una manifestación positivas en las derivaciones en las que el
posible en cualquier enfermedad autoinmune, segmento ST está elevado. Puede haber

473
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

depresión del segmento PR (curva de le- ECOCARDIOGRAMA-DOPPLER


sión auricular).
2. Estadio II: ocurre varios días después y El diagnóstico de pericarditis aguda debe ba-
representa el regreso del segmento ST ha- sarse en datos clínicos. Un ecocardiograma-
cia la línea de base, acompañado de apla- Doppler normal no excluye el diagnóstico. La
namiento de la onda T. Esto ocurre gene- principal utilidad del ecocardiograma es la
ralmente antes de que la onda T se vuelva detección de derrame pericárdico, pero este
negativa, a diferencia del patrón de evolu- hallazgo no es, por sí mismo, diagnóstico de
ción en el infarto de miocardio. pericarditis.
3. Estadio III: inversión de la onda T, general-
mente en la mayoría de las derivaciones,
que no se acompaña de pérdida de onda OTROS EXÁMENES DE LABORATORIO
R o aparición de ondas Q.
4. Estadio IV: reversión de las ondas T hacia Reactantes de fase aguda como la velocidad
su patrón normal, que puede ocurrir sema- de sedimentación y la proteína C reactiva
nas o meses más tarde. En algunos casos muestran desde mínimas hasta marcadas ele-
pueden persistir las ondas T negativas du- vaciones. El nivel refleja la intensidad del pro-
rante un tiempo prolongado después de la ceso y el posible compromiso subepicárdico.
desaparición de los síntomas clínicos, lo Los marcadores cardiacos como la CPK,
que no debe ser interpretado como signo CKMB y troponina reflejan el compromiso
de persistencia de la enfermedad. miocárdico por miocarditis subepicárdica.

Sólo en 50% de los casos son detectables los


4 estadios de evolución del electrocardiogra- TRATAMIENTO
ma. En 80% de los pacientes es posible de-
tectar depresión del segmento PR en estadios El tratamiento busca mejorar los síntomas y
muy precoces de la enfermedad. eliminar el agente etiológico. Muchos pacien-
tes son hospitalizados para estudio diagnós-
tico y observación de posibles complicaciones,
RADIOGRAFÍA DE TÓRAX. TOMOGRAFÍA particularmente derrame pericárdico y tapo-
AXIAL COMPUTADORIZADA (TAC). RESO- namiento cardiaco. El tratamiento debe ser
NANCIA NUCLEAR MAGNÉTICA (RNM). individualizado. Cualquier anti-inflamatorio no
esteroideo (AINE) efectivo puede ser utiliza-
En ausencia de derrame pericárdico no existe do. La indometacina debe ser evitada en adul-
alteración en la silueta cardiaca. Sin embargo, tos a menos que otras opciones fallen, por-
la radiografía de tórax es útil para detectar que reduce el flujo coronario y tiene marca-
anormalidades pulmonares en algunas de las dos efectos secundarios.
etiologías de pericarditis, como tuberculosis
o neoplasias. En una cuarta parte de los pa- Dependiendo de la severidad clínica y de la
cientes es posible detectar derrame pleural, respuesta al tratamiento, la duración puede
habitualmente en el lado izquierdo (a diferen- variar, siendo de 4 días para formas clínicas
cia de la insuficiencia cardiaca, que suele ser muy leves, o hasta de dos semanas para for-
en el lado derecho). mas más graves. Hay estudios que reportan
que la colchicina asociada a los AINES, o aun
como monoterapia, es efectiva en el manejo

474
CAPÍTULO XI: PERICARDITIS EN ADULTOS

agudo y ayuda a prevenir recurrencias (habi- La pericardiocentesis está indicada en las dos
tualmente es bien tolerada en dosis de 0,5 mg situaciones siguientes:
cada 12 horas). La terapia con corticoides
debe ser evitada, excepto en enfermedades 1. Presencia de una infección aguda grave
del tejido conectivo, o cuando todos los de- (neumonía, empiema, mediastinitis, perito-
más tratamientos han fallado. nitis, absceso subfrénico o sepsis) y evi-
dencia de derrame pericárdico, que pueda
PERICARDITIS VIRAL. PERICARDITIS AGU- sugerir la posibilidad de pericarditis puru-
DA IDIOPÁTICA. SÍNDROMES POSTINFARTO lenta.
Y POSTPERICARDIOTOMÍA. PERICARDITIS 2. Presencia de taponamiento cardiaco seve-
IDIOPÁTICA RECIDIVANTE ro (hipotensión, bajo gasto o shock).

El diagnóstico de pericarditis viral, pericardi- Si el taponamiento persiste o recidiva tras la


tis aguda idiopática, síndrome de Dressler o pericardiocentesis, se debe practicar drenaje
síndrome postpericardiotomía justifica la ins- quirúrgico con biopsia. La persistencia de sig-
tauración de reposo en cama mientras per- nos de taponamiento no grave tras una peri-
sistan el dolor y la fiebre. Se administran sali- cardiocentesis correcta no hace obligatorio un
cilatos durante un mínimo de dos semanas. nuevo drenaje. La pericardiectomía amplia
La dosis inicial (500 mg/6h de ácido acetilsa- sólo está indicada en casos excepcionales
licílico) se mantiene mientras persistan dolor (persistencia o recidiva de taponamiento gra-
y fiebre y se retira paulatinamente. Si no hay ve a pesar de drenaje quirúrgico correcto).
respuesta se administran AINES (por ejem-
plo, indometacina 25-50 mg/6-8h, paracetamol PERICARDITIS TUBERCULOSA
500 mg/6h o ibuprofeno 400-800 mg tres ve-
ces/día) aisladamente o en combinación en- Se administra tratamiento antituberculoso tri-
tre sí o con la aspirina. ple cuando se ha confirmado la etiología tuber-
culosa (aislamiento del bacilo de Koch) y en
Los corticoides no son fármacos de primera elec- los pacientes con pericarditis granulomatosa.
ción. Por el contrario, se debe evitar al máximo
su uso y sólo se deben considerar en casos de PERICARDITIS PURULENTA
persistencia de dolor intenso o fiebre alta rebel-
de a los fármacos antes mencionados, de más En caso de comprobarse derrame pericárdico
de siete días de evolución, y si se considera purulento por criterios macroscópicos o mi-
descartada la tuberculosis. El tiempo de admi- croscópicos, además de tratamiento antibióti-
nistración de corticoides es de no menos de 2 a co enérgico durante 4-6 semanas, se debe
4 semanas, según los casos. La dosis inicial (40- practicar drenaje quirúrgico. La pericardiecto-
60 mg de prednisona o equivalente) se mantie- mía está indicada sólo en caso de constric-
ne mientras persista dolor, fiebre o derrame im- ción severa y persistente o de taponamiento
portante y se reducirá de forma paulatina. recidivante.

El diagnóstico de cualquier forma de pericar- PERICARDITIS NEOPLÁSICA


ditis obliga a plantear el retiro o modificación
del tratamiento anticoagulante que el pacien- Los pacientes con pericarditis neoplásica de-
te estuviera recibiendo ya que, en principio, ben ser sometidos a evaluación individual res-
debe considerarse contraindicado. pecto a su estado general, pronóstico de la

475
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

enfermedad de base y repercusión hemodiná- en las mismas normas que las de la pericardi-
mica de la afección pericárdica. Como norma tis aguda idiopática, el derrame pericárdico
general se tiende a ofrecer los procedimientos crónico o la pericarditis constrictiva. Sin em-
terapéuticos menos agresivos. Los pacientes bargo, en el caso de la pericarditis constricti-
con taponamiento son sometidos a pericar- va hay que valorar la posible presencia de fi-
diocentesis, dejando un catéter intrapericár- brosis mediastínica y de miocardiopatía post-
dico para drenaje conectado a un sistema de irradiación, hechos que aumentan el riesgo y
aspiración en vacío. Este catéter se retirará disminuyen el beneficio de la pericardiectomía.
cuando el drenaje sea inferior a 25 ml en
24 h. PERICARDITIS EN PACIENTES CON SIDA

La persistencia de drenaje importante después En los pacientes asintomáticos la actitud ante


de 7 días, o bien la recidiva del derrame peri- un derrame pericárdico debe ser conservado-
cárdico con taponamiento después de haber ra, debido a que la mayoría son idiopáticos y
retirado el drenaje, plantea la posible instila- muchos se resuelven espontáneamente. Los
ción de tetraciclicina en la cavidad pericárdica. derrames asintomáticos abundantes pueden
En caso de nueva recidiva del derrame con responder al tratamiento con AINES.
taponamiento severo, se practica drenaje qui-
rúrgico por vía subxifoidea, y en casos muy En los derrames pericárdicos sintomáticos
especiales se debe considerar, incluso, la debe realizarse pericardiocentesis con fines
pericardiectomía total. diagnósticos. Las indicaciones de pericardio-
tomía subxifoidea son similares a las de otros
PERICARDITIS URÉMICA tipos de derrame pericárdico, y debe realizar-
se siempre en la pericarditis purulenta.
En los pacientes que aún no están sometidos
a diálisis, la aparición de la pericarditis urémica La afección pericárdica sintomática en los
es clara indicación para iniciarla. En los pa- pacientes con infección por el VIH es un mar-
cientes que presentan la pericarditis durante cador de mal pronóstico.
la diálisis crónica, ésta debe intensificarse.

Así mismo, debe reducirse la dosis de hepari- COMPLICACIONES


na ante el riesgo de derrame pericárdico he- DE LA PERICARDITIS
morrágico. Algunos autores recomiendan el
uso temporal de diálisis peritoneal. DERRAME PERICÁRDICO

El empleo de AINES o de corticoides es muy El espacio pericárdico contiene normalmente


controvertido. En general se considera que en entre 15 y 50 ml de líquido. Se entiende por
este tipo de pacientes ambos grupos de fárma- derrame pericárdico la presencia de una can-
cos son poco eficaces y presentan un alto ries- tidad de líquido mayor. La presencia de líqui-
go de efectos secundarios. do en el pericardio eleva la presión intraperi-
cárdica, pero la magnitud de esta elevación
PERICARDITIS POST IRRADIACIÓN depende no sólo de la cantidad absoluta del
líquido, sino también de la rapidez con la que
El tratamiento de las diferentes manifestacio- se ha acumulado y de las características físi-
nes de la pericarditis post irradiación se basa cas del pericardio.

476
CAPÍTULO XI: PERICARDITIS EN ADULTOS

En ocasiones, la acumulación de líquido en el cico. En el examen físico, el hallazgo más fre-


pericardio es completamente silente, sin ele- cuente es la distensión venosa yugular.
var la presión intrapericárdica. En estos casos,
pueden aparecer síntomas secundarios a la El pulso paradójico es otro dato de explora-
compresión mecánica de estructuras vecinas, ción física característico y se define como el
como disfagia por compresión del esófago, tos descenso de 10 mmHg o más en la presión
por compresión de un bronquio o de la trá- arterial sistólica durante la inspiración. Cuan-
quea, disnea por compresión del parénquima do el taponamiento cardiaco es severo, la pre-
pulmonar, hipo por compresión del nervio sión arterial y el gasto cardiaco descienden y
frénico o afonía debido a compresión del ner- existe taquicardia y taquipnea. Los tonos car-
vio laríngeo recurrente. diacos pueden estar apagados. El paciente
puede mostrar, además, signos de bajo gasto
La exploración física de pacientes con derra- cardiaco y oliguria.
me pericárdico puede ser normal. Sólo cuan-
do la presión intrapericárdica está significativa- Criterios diagnósticos. El diagnóstico de ta-
mente elevada aparecen los hallazgos carac- ponamiento se hace sobre la base de la de-
terísticos del taponamiento (véase más ade- mostración de compromiso hemodinámico en
lante). Cuando la duración del derrame es su- presencia de derrame pericárdico moderado
perior a tres meses con características esta- o severo. Los criterios diagnósticos de tapo-
bles se considera que el derrame pericárdico namiento son:
es crónico.
1. Ingurgitación yugular.
Criterios diagnósticos. Demostración por 2. Pulso paradójico.
cualquier medio de exploración (habitualmente 3. Hipotensión arterial.
ecocardiografía) de líquido pericárdico en can-
tidad superior a la fisiológica. La cuantificación PERICARDITIS CONSTRICTIVA
del derrame se hace por criterios ecocardio-
gráficos La pericarditis constrictiva ocurre cuando el
pericardio fibrótico, engrosado y adherido res-
TAPONAMIENTO CARDÍACO tringe el llenado diastólico cardiaco. La pericar-
ditis constrictiva puede constituir el estadio fi-
En sentido amplio, el taponamiento cardiaco nal evolutivo de muchos de los procesos (infla-
es el síndrome debido a la compresión del co- matorios, traumáticos) que afectan el pericar-
razón por el derrame pericárdico. En realidad, dio, aunque en la mayoría de los casos de
el taponamiento es un síndrome clínico hemo- pericarditis constrictiva establecida no se pue-
dinámico con un continuum en cuanto a gra- de identificar una causa etiológica concreta.
duación de severidad, que puede ir desde li- Es posible que muchas de estas pericarditis
geros aumentos de la presión intrapericárdica constrictivas “idiopáticas” sean secuela de una
sin repercusión clínica reconocible hasta un pericarditis aguda inflamatoria no detectada
cuadro de gasto cardiaco bajo y muerte. El clínicamente. En la mayoría de los casos exis-
taponamiento cardiaco se puede desarrollar te afección de ambas hojas pericárdicas,
ante un derrame pericárdico de cualquier cau- parietal y visceral.
sa y puede presentarse en forma aguda o cró-
nica. La principal manifestación clínica es la Generalmente existe engrosamiento homogé-
disnea; en ocasiones puede haber dolor torá- neo del pericardio que causa restricción uni-

477
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

forme al llenado de todas las cámaras cardia- DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL


cas. Al afectarse en forma homogénea todas
las cámaras cardiacas, se produce elevación La pericarditis aguda debe ser diferenciada
y un equilibrio en las presiones diastólicas de de otros síndromes que producen síntomas y
las cuatro cavidades. signos similares, teniendo en cuenta que ésta
puede ser parte de una enfermedad generali-
Los pacientes con pericarditis constrictiva tie- zada, y presentarse de manera aislada o como
nen elevación de la presión venosa sistémica parte de un desorden que afecta un órgano
y de las presiones de llenado ventricular, por lo adyacente. El dolor aislado o referido a los
cual predominan los síntomas de congestión músculos trapecios es muy sugestivo de peri-
sistémica como el edema en extremidades o carditis. Cuando el dolor es muy parecido al
distensión abdominal por congestión hepática de origen isquémico cardiaco, se puede de-
pasiva y ascitis. Cuando la presión de llenado tectar que el de la pericarditis es de mayor
ventricular izquierda y derecha se eleva a 15- duración, cortante y no responde a la terapia
30 mmHg, aparecen síntomas de congestión vasodilatadora. Un tercio de los pacientes con
venosa pulmonar, como disnea, tos y ortopnea. pericarditis puede tener cambios electrocar-
diográficos compatibles con isquemia miocár-
El pulso paradójico es infrecuente, a no ser dica. Es importante tener en cuenta que los
que exista derrame pericárdico asociado. cambios electrocardiográficos en el segmen-
to ST de la pericarditis son generalmente di-
El dato más característico a la auscultación fusos, mientras que en la isquemia miocárdica
es un ruido diastólico pericárdico (“pericardial se observa afección de regiones específicas
knock” o chasquido pericárdico), que ocurre (por derivaciones).
generalmente a 0,09-0,12 del segundo ruido
cardiaco y que corresponde a la detención El embolismo pulmonar puede confundirse
súbita del llenado ventricular por el pericardio con pericarditis aguda, particularmente si hay
no distensible. presencia de dolor pleurítico. El frote pericár-
dico monofásico puede confundirse con so-
Es frecuente la presencia de hepatomegalia plo de insuficiencia mitral, tricuspídea o de-
y puede haber ascitis e ictericia. fecto septal ventricular.

TABLA 1. DOLOR EN PERICARDITIS AGUDA VS ISQUEMIA AGUDA


CARACTERISTICA PERICARDITIS AGUDA ISQUEMIA AGUDA
Inicio Súbito usualmente Gradual, progresivo
Localización Subesternal o precordial Izquierdo Igual o confinado a zonas de irradiación
Irradiación Igual que el isquémico, pero Hombros, brazos, nuca, mandíbula,
usualmente a trapecios espalda.
Características Cortante, profundo, opresivo Sensación de presión o quemadura
Inspiración Aumenta el dolor No hay efecto a no ser que se asocie a
pericarditis por infarto
Duración Persistente, puede aparecer y Usualmente intermitente <30 minutos, o
desparecer más si es angina inestable.
Movimiento Aumenta el dolor No lo afecta usualmente
Postura Aumenta acostado y mejora al No mejora al sentarse
sentarse e inclinar el cuerpo
Nitroglicerina No tiene efecto Usualmente mejora el dolor

478
CAPÍTULO XI: PERICARDITIS EN ADULTOS

TABLA 2. ELECTROCARDIOGRAMA EN PERICARDITIS AGUDA VS ISQUEMIA AGUDA

CARACTERÍSTICA PERICARDITIS AGUDA ISQUEMIA AGUDA


J-ST Elevación difusa usualmente cóncava Desviación convexa con cambios recípro-
sin depresión recíproca cos en caso de infarto
Depresión del segmento PR Frecuente Casi nunca
Ondas Q anormales No, a menos que exista un infarto Común con infarto
Onda T Invertida después de que el punto J Invertida mientras el segmento ST conti-
regresa a la línea de base núe elevado (infarto)
Arritmia No (en ausencia de enfermedad Frecuente
cardiaca)
Anormalidades de la conducción Ninguna (en ausencia de enfermedad Frecuente
cardiaca)

TABLA 3. FACTORES CLÍNICOS EN PERICARDITIS AGUDA VS ISQUEMIA AGUDA

CARACTERISTICA PERICARDITIS AGUDA ISQUEMIA AGUDA


Enzimas cardiacas Normales o elevados Elevados (infarto)
Frote pericárdico En muchos casos Sólo si hay pericarditis
S3 anormal Ausente Puede estar presente
S4 anormal Ausente Casi siempre presente
S1 Normal A menudo velado
Congestión pulmonar Ausente Puede estar presente
Soplos Ausente a no ser que sea pre-existente Pueden estar presentes

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Braunwald E , Libby P Douglas D. Heart Disease. 4. Mehta A, Mehta M, Jain AC. Constrictive pericar-
6th edition. Saunders , Philadelphia, 2001. ditis. Clin Cardiol 1999; 22:334-344.
2. Hakim JG, Ternouth I, Mushangi E, et al A. Double 5. Spodick D. Pericardial diseases. En: Heart
blind randomised placebo controlled trial of Disease. Editado por E Braunwald. 6th edition.
adjunctive prednisolone in the treatment of effusive McGraw Hill, 2001.
tuberculous pericarditis in HIV seropositive 6. Trautner BW, Darouiche RO. Tuberculous pericar-
patients. Heart 2000; 84:183-188. ditis: optimal diagnosis and management. Clin
3. Hoit B. Pericardial heart disease. Curr Probl Infect Dis 2001; 33:954-961.
Cardiol 1997; 22:355-400.

479
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XII

Pericardiocentesis

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades de Medicina
Bogotá

E l procedimiento de pericardiocentesis con-


siste en la introducción, a través de la
pared torácica, de una aguja montada en una
PROCEDIMIENTO
1. Los signos vitales del paciente deben ser
jeringa con el fin de extraer de la cavidad monitorizados y se debe tomar electrocar-
pericárdica sangre, líquido de exudado o pus. diograma antes, durante y después del pro-
cedimiento.
2. Si el tiempo lo permite, se efectúa la prepa-
INDICACIONES ración quirúrgica del área xifoidea y subxi-
foidea.
Se utiliza en heridas de corazón con tapona- 3. Si es necesario se coloca anestesia local
miento y paro cardiaco o inminencia de paro, en el sitio de la punción.
en pericarditis purulenta y en pericarditis cró- 4. Se utiliza una aguja #16 o # 18 (6 pulga-
nica (urémica, tuberculosa entre otras), como das, 15 cm) o mayor con cubierta de plás-
procedimiento para diagnóstico y como mo- tico, la que se une a una jeringa vacía de
dalidad de tratamiento. 50 ml por medio de una llave de tres vías.
5. Se examina al paciente para encontrar
Como lo expresan Morales y colaboradores cualquier desviación del mediastino que
del Hospital Universitario San Vicente de Paúl haya causado una desviación significante
de Medellín en la guía Trauma Cardiaco de del corazón.
esta misma serie, “la punción directa del 6. En un ángulo de 45° se punciona la piel de
pericardio (pericardiocentesis) ha sido aban- 1 a 2 cm por debajo del borde izquierdo de
donada como medio diagnóstico por su esca- la unión condroxifoidea.
sa sensibilidad y por el riesgo de lesionar el 7. Cuidadosamente se avanza la aguja en
corazón. El procedimiento jugó un papel im- dirección cefálica, dirigiendo la aguja ha-
portante como método terapéutico y cia la punta de la escápula izquierda.
diagnóstico”. 8. Cuando la aguja se introduce más allá de
la cavidad pericárdica, por ejemplo, dentro
El propósito de esta guía es describir el pro- del músculo ventricular, aparece en el mo-
cedimiento, que con la técnica de Seldinger nitor del ECG una imagen conocida como
que permite la introducción de un catéter en “corriente de lesión”, cambios importantes
vez de la tradicional aguja gruesa, es más de la onda ST-T o ensanchamiento y creci-
seguro y todavía diversos autores lo utilizan. miento del complejo QRS. Este patrón in-
dica que la aguja de la pericardiocentesis

476
CAPÍTULO XII: PERICARDIOCENTESIS

debe ser retirada hasta de que vuelva a COMPLICACIONES


aparecer el trazo basal del electrocardio- DE LA PERICARDIOCENTESIS
grama. También pueden ocurrir extrasísto-
les ventriculares secundarias a la irritación 1. Aspiración de sangre del ventrículo en lu-
del miocardio ventricular. gar de sangre del pericardio.
9. Cuando la punta de la aguja penetra al saco 2. Laceración del epicardio o del miocardio
pericárdico lleno de sangre, se deberá ex- ventriculares.
traer la mayor cantidad posible de sangre 3. Laceración de una arteria o vena coronarias.
no coagulada. 4. La producción de un nuevo hemopericardio
10. Durante la aspiración, el epicardio se acer- secundario o laceración de una arteria o
ca a la superficie del pericardio, así como vena coronaria del epicardio ventricular o
la punta de la aguja; por lo tanto, puede de ambas estructuras.
volver a aparecer una corriente de lesión 5. Fibrilación ventricular.
en el electrocardiograma. Esto indica que 6. Neumotórax debido a punción del pulmón.
la aguja de la pericardiocentesis debe ser 7. Punción de un vaso mayor, lo que empeo-
retirada cuidadosamente y, si persiste esta ra el taponamiento pericárdico.
corriente de lesión, deberá retirarse la aguja 8. Punción del esófago con mediastinitis sub-
por completo. secuente.
11. Opción: Mediante la técnica de Seldinger 9. Punción del peritoneo que puede dar lugar
se pasa una guía flexible de acero a través a peritonitis o a un aspirado “falso positivo”.
de la aguja dentro del saco pericárdico, se
retira la aguja y sobre la guía metálica se
pasa un catéter de plástico #14. Se retira LECTURAS RECOMENDADAS
la guía metálica y se coloca la llave de tres
vías en el catéter de plástico. Esta es la 1. American College of Surgeons. ATLS, Programa
técnica preferida en la actualidad. Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi-
12. L. Después de terminada la aspiración, la cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole-
gio Americano de Cirujanos, Chicago, 1997.
jeringa se retira dejando la llave de tres vías
2. Bastian A, Meissner A, Lins M, et al. Pericar-
cerrada, unida al catéter, el cual queda den- diocentesis: differential aspects of a common
tro del saco pericárdico, asegurándolo en procedure. Intensive Care Med 2000; 26:572-576.
esa posición. 3. Betts TR, Radvan JR. Contrast echocardiography
13. En caso de que los síntomas de tapona- during pericardiocentesis. Heart 1999; 81:329.
miento cardiaco persistan, se abre la llave 4. Blaivas M, Graham S, Lambert MJ. Impending
de tres vías y nuevamente se aspira el saco cardiac tamponade, an unseen danger?. Am J
pericárdico. El catéter de plástico que que- Emerg Med 2000; 18:339-340.
5. Bruch C, Schmermund A, Dagres N, et al. Changes
da dentro del saco pericárdico puede ser
in QRS voltage in cardiac tamponade and peri-
suturado o fijado en ese sitio, cubriéndolo cardial effusion: reversibility after pericardiocente-
con un pequeño apósito; esto permite una sis and after anti-inflammatory drug treatment. J
descompresión periódica mientras el pa- Am Coll Cardiol 2001; 38:219-226.
ciente es llevado a cirugía o trasladado a 6. Chen EP, Miller JF. Modern approaches and use
otra institución para sus cuidados. of surgical treatment for pericardial disease. Curr
Cardiol Rep 2002; 4:41-46.
7. Fisher JD, Ferrick KJ, Gross JN et al. Internal
transcardiac pericardiocentesis for acute tampo-
nade. Am J Cardiol 2000; 86:1388-1389.

477
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

8. Gibbs CR, Watson RD, Singh SP, Lip GY. with a novel device. Clin Cardiol 1999 ;22:I36S-
Management of pericardial effusion by drainage: 139S.
a survey of 10 years’ experience in a city centre 10. Salem K, Mulji A, Lonn E. Echocardiographically
general hospital serving a multiracial population. guided pericardiocentesis - the gold standard for
Postgrad Med J 2000; 76:809-813. the management of pericardial effusion and
9. Macris MP, Igo SR. Minimally invasive access of cardiac tamponade. Can J Cardiol 1999; 15:1251-
the normal pericardium: initial clinical experience 1255.

478
CAPÍTULO XIII: SHOCK CARDIOGÉNICO

CAPÍTULO XIII

Shock cardiogénico

Juan Gabriel Cendales Rey, MD


Internista, Unidad de Cuidado Intensivo Médico
Fundación Santa Fe Bogotá

E l shock cardiogénico (SC) es un estado


de hipoperfusión tisular debido a disfun-
ción cardiaca. El infarto agudo del miocardio
Diagnóstico del shock cardiogénico
Signos clínicos
Hipotensión
es la primera causa de shock cardiogénico. Oliguria
Una rápida evaluación y el inicio temprano de Alteraciones del sensorio
medidas de soporte y de tratamiento definiti- Frialdad en extremidades
vo mejoran la supervivencia. Criterios hemodinámicos
Presión sistólica <90 mmHg por más de 30 minutos
Índice cardiaco <2,2 L/min/m2
DEFINICIÓN Presión en cuña mayor de 18 mmHg

La definición clínica de shock cardiogénico


(SC) incluye la disminución del gasto cardiaco
y la presencia de hipoperfusión tisular en pre- CLASIFICACIÓN
sencia de un volumen intravascular adecuado.
Entre los signos clínicos del SC se incluyen En 1967 Killip, en una serie de casos de 250
oliguria, alteraciones del sensorio y frialdad pacientes los dividió en cuatro clases:
de las extremidades. Los criterios hemodi-
námicos son: Killip I: sin signos de falla cardiaca.
Killip II: presencia de galope por S3 y/o ester-
1. Hipotensión (presión sistólica <90 mmHg, tores bibaseles.
por lo menos durante 30 minutos). Killip III: presencia de edema pulmonar.
2. Disminución del índice cardiaco (<2,2 L/ Killip IV: shock cardiogénico.
min/m2) en presencia de una presión en
cuña elevada (>18 mmHg). Con el advenimiento de la monitorización in-
vasora con el catéter de arteria pulmonar
El SC se diagnostica después de haber docu- (Swan-Ganz), Forrester y Swan definieron
mentado disfunción miocárdica y excluido o cuatro estados hemodinámicos análogos a los
corregido otros factores tales como hipovole- descritos por Killip, los cuales se pueden pre-
mia, hipoxia y acidosis. sentar después de un infarto del miocardio.

Estado I: pacientes con presión en cuña y


gasto cardiaco normal.

483
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Estado II: pacientes con presión en cuña miopatía en fase terminal, contusión miocár-
elevada y gasto cardiaco normal. dica, shock séptico, enfermedad valvular y
Estado III: pacientes con presión en cuña nor- disfunción miocárdica después de un tiempo
mal y gasto cardiaco disminuido. prolongado de bypass cardiopulmonar (ciru-
Estado IV: pacientes con presión en cuña ele- gía cardiovascular).
vada y gasto cardiaco disminuido.

Causas de shock cardiogénico


INCIDENCIA Infarto agudo del miocardio
Falla de bomba
Infarto extenso
La incidencia del SC ha venido en descenso
Infarto pequeño en pacientes con disfunción ventricular
en los últimos 20 años. En la década de los izquierda previa
setenta, 20% de los infartos agudos del mio- Re-infarto
cardio (IAM) transmurales precedían al SC; Expansión del infarto
actualmente sólo 7% de este tipo de infartos Complicaciones mecánicas
evoluciona hacia SC. Insuficiencia mitral aguda secundaria a ruptura del
músculo papilar
A pesar de los adelantos en el manejo de la Defectos septales ventriculares
Ruptura de la pared libre
falla cardiaca y del infarto agudo del miocardio,
Taponamiento cardiaco
la mortalidad en pacientes con SC es alta, del Infarto ventrículo derecho
orden de 50-80%. En los últimos 10 años la Otras condiciones
mortalidad ha disminuido gracias a las nue- Cardiomiopatía terminal
vas técnicas de reperfusión en fase tempra- Miocarditis
na, invasoras y no invasoras, como angioplas- Contusión miocárdica
tia primaria, revascularización miocárdica, Bypass cardiopulmonar prolongado
balón de contrapulsación aórtica, trombolíticos Shock séptico severo con depresión miocárdica
Obstrucción del tracto de salida del ventrículo izquierdo
y otros fármacos que disminuyen el tamaño
Estenosis aórtica
del IAM. Pero el SC sigue siendo la causa de Cardiomiopatía hipertrófica
muerte más frecuente en pacientes hospitali- Obstrucción del llenado ventricular izquierdo
zados con infarto agudo del miocardio. Estenosis mitral
Mixoma auricular izquierdo
Insuficiencia mitral aguda por ruptura de cuerda
ETIOLOGÍA Y EPIDEMIOLOGÍA tendinosa
Insuficiencia aórtica aguda
La causa más común de SC es el infarto agu-
Tomado y traducido de: Hollenburg SM, Kavinsky CJ, Parrillo
do del miocardio extenso; infartos pequeños
JE. Ann Intern Med 1999; 131:48-59
en extensión en un paciente con disfunción
ventricular izquierda previa también pueden
precipitar el estado de shock.

El SC puede ocurrir por problemas mecánicos Dentro de los factores de riesgo para el desa-
tales como insuficiencia mitral aguda, ruptura rrollo de SC en pacientes con infarto de
del septum interventricular o infartos ventri- miocardio están la edad, diabetes, infarto an-
culares derechos extensos. Otras causas de terior, enfermedad vascular periférica y enfer-
shock cardiogénico son: miocarditis, cardio- medad cerebrovascular.

484
CAPÍTULO XIII: SHOCK CARDIOGÉNICO

PATOGÉNESIS Una clave para entender la fisiopatología y el


DEL SHOCK CARDIOGÉNICO tratamiento del SC es el concepto de la disfun-
ción miocárdica reversible. Se han propuesto
La falla cardiaca en pacientes con SC se ini- dos términos importantes: el primero, aturdi-
cia por isquemia o infarto del miocardio, ge- miento miocárdico, corresponde a masa mio-
neralmente de localización anterior, transmural cárdica viable pero no funcional por efectos
y extenso (35%-40% de compromiso de la de la isquemia; el segundo, miocardio hiber-
masa miocárdica). El miocardio isquémico o nante, es un estado de disfunción de la masa
necrótico disminuye el volumen del latido y por miocárdica en reposo causado por disminu-
lo tanto el gasto cardíaco. La perfusión miocár- ción importante del flujo coronario. La hiberna-
dica, que depende del gradiente de presión ción puede ser vista también como un meca-
entre el sistema arterial coronario y el ventrí- nismo compensatorio que reduce la función
culo izquierdo y de la duración de la diástole, contráctil del miocardio hipoperfundido, mini-
resulta comprometida por hipotensión y taqui- mizando el potencial de isquemia o necrosis.
cardia, lo cual aumenta la isquemia. El aumen-
to en la presión diastólica ventricular causada El miocardio hibernante mejora con la revascu-
por la falla de bomba, disminuye la perfusión larización y el miocardio aturdido mejora con
coronaria, que incrementa los requerimientos la estimulación con inotrópicos. Estas entida-
de oxígeno por el miocardio, lo cual empeora des son difíciles de diferenciar y pueden co-
todavía más la isquemia. La disminución del existir al tiempo. En ambos casos la disfunción
gasto cardiaco también compromete la perfu- es reversible debido a que si se mejora el flu-
sión, lo que lleva a acidosis láctica, que a su jo, mejora la función miocárdica, lo cual se tra-
vez afecta la función sistólica. duce en una mejor supervivencia.

Cuando se compromete la función miocárdica


se activan mecanismos compensatorios tales DIAGNÓSTICO CLÍNICO
como aumento en la frecuencia cardiaca, au-
mento en la contractilidad y retención de líqui- SÍNTOMAS
dos para aumentar la precarga, efectos me-
diados por la activación del sistema simpáti- 1. Los correspondientes al dolor de un IAM
co. Estos mecanismos compensatorios em- (ver guía sobre Infarto Agudo del Miocar-
peoran la situación cuando se presenta el dio en esta misma serie).
shock cardiogénico, lo que da como resulta- 2. Disnea de severidad variable.
do edema pulmonar e hipoxemia. La vaso- 3. Astenia, malestar general.
constricción para mantener una adecuada pre-
sión arterial eleva la poscarga, aumentando SIGNOS
la demanda de oxígeno por el miocardio, lo
cual empeora la isquemia, y si el ciclo no se 1. Compromiso del estado general.
interrumpe en forma temprana, termina con 2. Palidez, piel fría, diaforesis, cianosis.
la muerte del paciente. 3. Ingurgitación yugular, principalmente en
IAM ventricular derecho.
Una intervención rápida y adecuada de reper- 4. Vasoconstricción con pobre llenado capilar.
fusión que mejore la isquemia es crucial una 5. Presión arterial sistólica <90 mmHg.
vez se ha instaurado el SC. 6. Pulsos periféricos disminuidos en amplitud.
7. Taquicardia y galope por S3.

485
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

8. Soplo pansistólico en ruptura de músculo Laboratorio. CK-total, CK-MB, sodio, potasio,


papilar o del septum interventricular. magnesio, pruebas de coagulación, glicemia
9. Polipnea. y creatinina sérica.
10. Estertores en cantidad variable. No en IAM
ventricular derecho.
11. Signos de taponamiento y disociación elec- TRATAMIENTO
tromecánica en ruptura de pared libre del
ventrículo izquierdo. MEDIDAS GENERALES

1. Oxígeno por máscara con FIO2 de 50% o


DIAGNÓSTICO PARACLÍNICO según gases arteriales.
2. Catéter central, preferiblemente en ante-
Electrocardiograma. Muestra el trazado de brazo, de tipo drum.
IAM (Ver guía Infarto Agudo del Miocardio 3. Sonda vesical.
en esta misma serie); 20% de los SC por IAM 4. Monitorización de la presión arterial, fre-
con extensión al ventrículo derecho tienen un cuencia y ritmo cardiaco, oximetría de pul-
bloqueo auriculoventricular completo. so, presión venosa central y diuresis.

Radiografía simple del tórax. Puede ser nor-


mal tanto en la disfunción ventricular izquier- MEDIDAS ESPECÍFICAS
da como en la derecha. Hay signos de hiper-
tensión venocapilar. La presencia de cardio- Dopamina.
megalia generalmente se debe a patología Dosis: 5-10 mcg/kg/minuto, buscando efecto
cardiaca previa. inotrópico.
10-20 mcg/kg/minuto como vasocons-
Gases arteriales. Hipoxemia variable según trictor.
la gravedad del shock. Normo, hipo o hiper- Presentación: frascos de 200 miligramos.
capnia de acuerdo con el grado de compro-
miso pulmonar. Acidosis metabólica predomi- Dobutamina.
nante. Dosis: 5-7,5 mcg/kg/minuto. Debido a su efec-
to B1 agonista, incrementa el inotropismo,
Ácido láctico. Elevado. Niveles superiores a gasto cardiaco, volumen latido, trabajo ventri-
4 milimoles se relacionan con mal pronóstico. cular izquierdo y derecho. Disminuye la pre-
sión de fin de diástole ventricular sin producir
Ecocardiografía. Valora el grado de disfun- taquicardia excesiva ni hipotensión. Es un
ción ventricular sistólica izquierda y derecha. vasodilatador pulmonar.
Detecta la causa del shock: infarto ventricular
izquierdo o derecho, ruptura del músculo papi- Dosis mayores de 7,5 mcg/kg/minuto tienen
lar, del septum o de la pared libre del ventrículo un efecto vasodilatador, por su efecto B2 ago-
izquierdo. nista, que puede disminuir la presión arterial
sistémica.
Presión venosa central. De gran utilidad en
urgencias como ayuda diagnóstica y en el Es ideal la asociación dopamina-dobutamina
manejo y tratamiento. a las dosis recomendadas. Presentación: fras-
cos de 250 miligramos.

486
CAPÍTULO XIII: SHOCK CARDIOGÉNICO

Balón de contrapulsación aórtica: terios enumerados en la guía de Infarto Agu-


• Mejora el flujo miocárdico durante la do del Miocardio.
diástole.
• Disminuye la postcarga. Cirugía de urgencia. Está indicada en las si-
• Disminuye la presión de fin de diástole del guientes condiciones:
ventrículo izquierdo y la presión en cuña
de la arteria pulmonar. a. En angioplastia primaria fallida.
b. En shock asociado con ruptura de múscu-
Intubación orotraqueal lo papilar, septum o pared libre.
• El cuadro clínico del paciente y/o los ga-
ses arteriales determinan la necesidad de En todos los casos se requiere la colocación
intubación orotraqueal. previa de un balón de contrapulsación aórtica
• Generalmente se requieren intubación
orotraqueal y ventilación mecánica.
LECTURAS RECOMENDADAS
Catéter de flotación pulmonar (Swan-Ganz)
• Su inserción debe hacerse en la unidad de 1. Goldberg RJ, Samad NA, Yarzebski J et al. Tem-
cuidado intensivo. poral trends in cardiogenic shock complicating
acute myocardial infaction. N Engl J Med 1999;
• Evalúa los parámetros hemodinámicos,
340:1162-1168.
evolución y pronóstico en forma adecuada. 2. Hochman JS, Buller CE, Sleepe LA, et al. Cardio-
• Facilita la administración de fármacos. genic shock complicating acute myocardial infac-
tion -etiologies, management and outcome: a
Reperfusión miocárdica aguda report from the Shock Trial Registry, J Am Coll
• Es lo ideal si existe un servicio de hemodi- Cardiol 2000; 36:1063-1070.
3. Hollenberg SM, Kavinsky CJ, Parrillo JE.
namia; se debe realizar angiografía corona- Cardiogenic shock. Ann Intern Med 1999; 131:
ria cuando la evolución del shock es me- 47-59.
nor de 24 horas, colocando previamente 4. Kern KB. Postresuscitation myocardial dys-
un balón de contrapulsación aórtica. function. Cardiol Clin 2002; 20:89-101.
• De acuerdo con el resultado de la angio- 5. Killip T, Kimball JT. Treatment of myocardial
grafía coronaria, se decide una de las si- infarction in a coronary care unit. A two year expe-
rience with 250 patients. Am J Cardiol. 1967;
guientes conductas: 20:457-464.
- Angioplastia primaria. 6. Menon J, Hochman JS. Management of
- Trombolisis y angioplastia primaria. cardiogenic shock complicating acute myocardial
- Revascularización miocárdica urgente. infarction. Heart 2002; 88:531-537.
- Tratamiento farmacológico exclusiva- 7. Ryan TJ, Anderson JL, Antman EM, et al. ACC/
AHA guidelines for the management of patients
mente. with acute myocardial infarction: a report of the
American College of Cardiology / American Herat
En ausencia de un servicio de hemodinamia, Association Task Force on Practice Guidelines. J
se realiza trombolisis periférica según los cri- Am Coll Cardiol 1996; 28:1328-1428.

487
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIV

Taponamiento Cardiaco

Mario Bernal, MD
Jefe, Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

Claudia Contreras, MD
Residente de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l taponamiento cardíaco se define como


el incremento en la presión intrapericár-
dica, con compresión cardíaca secundaria a
FISIOPATOLOGÍA

La presión que existe en el espacio pericárdico


la acumulación de líquido dentro del espacio es semejante a la presión de la aurícula dere-
pericárdico. Se puede desarrollar en forma cha. Cuando se acumulan más de 50 mL en-
aguda o crónica por un derrame pericárdico, tre el pericardio visceral y el parietal (saco
en cualquier pericarditits, pero sus causas más pericárdico), la presión en su interior empieza
comunes son neoplasias, virus, uremia, infec- a subir hasta el punto de igualar o sobrepasar
ción bacteriana purulenta o tuberculosis, tras la presión diastólica de la aurícula derecha y
infarto de miocardio, después de la perfora- del ventrículo derecho, lo que produce colap-
ción de alguna cavidad cardíaca por so de estas cavidades en diástole y tapona-
procedimientos invasores; también puede ser miento cardíaco. La elevación de las presio-
idiopática. nes intrapericárdicas y de la aurícula derecha
es menos notable si hay hipovolemia, caso
Las tres características principales del tapona- en el cual el taponamiento cardíaco puede
miento son la elevación de las presiones intra- quedar encubierto. La presión puede también
cardíacas, la limitación del llenado ventricular subir alrededor de la aurícula izquierda y el
y la reducción del gasto cardíaco. La canti- ventrículo izquierdo hasta igualar su presión
dad de líquido necesaria para producir este diastólica, colapsándolos en diástole. El lle-
estado crítico puede ser tan sólo 200 ml cuan- nado diastólico de ambos ventrículos cae, lo
do el líquido se acumula rápidamente, o su- mismo que el volumen sistólico; como res-
perior a 2.000 ml en los derrames de acumu- puesta aumenta el tono simpático, lo que se
lación lenta, cuando el pericardio tiene la opor- manifiesta con taquicardia y mayor fracción
tunidad de distenderse y acomodarse al volu- de expulsión que mantienen el gasto cardía-
men creciente. El volumen de líquido necesa- co; las resistencias arteriales periféricas tam-
rio para provocar el taponamiento está bién se elevan, la excreción de sodio urinario
relacionado directamente con el espesor del disminuye, lo mismo que la liberación de fac-
miocardio ventricular e inversamente con el tor natriurético. En los casos severos estos
grosor del pericardio parietal. mecanismos no logran mantener el gasto car-
díaco ni la presión arterial y aparece disfunción

488
CAPÍTULO XIV: TAPONAMIENTO CARDIACO

de múltiples órganos. El flujo coronario decae, tomas sistémicos adicionales pueden ser ano-
causando hipoperfusión del subendocardio, lo rexia, pérdida de peso y debilidad intensa.
cual agrega un daño de la bomba al defecto
ya existente y deteriora el volumen por latido. En el examen físico, la distensión yugular es
En los casos severos hay bradicardia que pre- un marcador de diagnóstico que coincide con
cede a la hipotensión severa y a la disocia- prominente onda x sistólica descendente y
ción electromecánica. ausencia de colapso y diastólico. Otros hallaz-
gos son taquipnea, taquicardia, pulso paradó-
El retorno venoso sistémico se altera durante jico con desaparición inspiratoria total del pul-
el principio de la diástole, se altera el vacia- so humeral y de los ruidos de Korotkoff, frote
miento de la aurícula derecha, la cual es com- pericárdico, hepatomegalia y disminución de
primida o parcialmente colapsada durante la los ruidos cardíacos.
diástole; estos sucesos se expresan gráfica-
mente en las ondas del sistema venoso o de El pulso paradójico es crucial en el diagnósti-
la aurícula derecha, en las cuales el descen- co y consiste en la disminución de la presión
so sistólico x es relevante mientras que el arterial de más de 10 mmHg durante la inspi-
descenso diastólico y está ausente o atenua- ración profunda; no es patognomónico del
do. La presión venosa central siempre se taponamiento, ya que se puede observar en
encuentra elevada. la enfermedad pulmonar obstructiva, en la
miocardiopatía restrictiva, en la obesidad y en
el embolismo pulmonar masivo.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
DATOS FÍSICOS EN EL TAPONAMIENTO
Se ha descrito la tríada de Beck caracteriza- CARDIACO
da por presión arterial baja, presión venosa
central elevada, y “corazón quieto” con rui- Presión venosa sistémica alta
dos muy débiles, pero estos hallazgos son tí- Pulso paradójico
picos de taponamiento cardíaco causado por Frecuencia respiratoria >20/min
hemorragia intrapericárdica en caso de heri- Frecuencia cardiaca ≥100/min
das cardíacas penetrantes, disección de aor- Presión sistólica < 100 mmHg
ta y rotura intrapericárdica de un aneurisma Ruidos cardiacos disminuidos
aórtico o cardíaco. En los casos no inmedia- Frote pericárdico
tamente mortales disminuye el gasto cardía- Presión arterial en declinación rápida
co y la presión arterial, lo que lleva a taqui-
Modificado de Guberman BA, et al.: Cardiac
cardia y taquipnea; el paciente puede presen- tamponade in medical patients. Circulation 1981;
tar estupor, agitación e inquietud. La presión 64: 633-640.
venosa yugular se halla elevada, la actividad
cardiaca precordial por lo general no es pal-
pable y los ruidos cardiacos son débiles o
inaudibles. Se observan extremidades frías y EXÁMENES PARACLÍNICOS
húmedas, también anuria.
Radiografía de tórax: el corazón puede pre-
Cuando el taponamiento ocurre en forma cró- sentar un tamaño completamente normal
nica, los pacientes presentan principalmente cuando el taponamiento cardiaco se debe a
disnea acompañada de dolor torácico; los sín- hemopericardio agudo ocasionado por

489
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

laceración o rotura cardiaca. Si un derrame Clase IIA:


de más de 250 mL es la causa, la silueta
cardiaca puede estar agrandada, con forma Diagnóstico y valoración de la severidad
de “garrafa”. del taponamiento cardíaco. El diagnóstico
de taponamiento debe hacerse sobre la
Electrocardiograma: las anomalías electro- base de criterios clínicos pero el ecocardio-
cardiográficas traducen la pericarditis aguda grama es esencial para confirmar la presen-
y el derrame pericárdico como reducción en cia de derrame pericárdico y, por otra par-
el voltaje del complejo QRS y aplanamiento te, el ecocardiograma bidimensional y el
de las ondas T. En presencia de derrame estudio Doppler pueden aportar datos muy
pericárdico severo puede observarse alternan- sugestivos de taponamiento (colapsos, al-
cia eléctrica (cambios de la morfología y vol- teración de flujos).
taje del complejo QRS a latidos alternos) que
puede ser de 2:1 o 3:1.
Tomografía axial computadorizada (TAC),
Ecocardiograma Doppler: es un excelente Resonancia nuclear magnética (RNM): tanto
método para el diagnóstico; ayuda a com- la TAC como la RNM son técnicas útiles para
probar la presencia y magnitud del derrame detectar derrame pericárdico y su distribución,
pericárdico. La falta de pruebas ecocardio- en ocasiones, permiten caracterizar su natu-
gráficas de derrame pericárdico excluye vir- raleza (por ejemplo, hemorrágico).
tualmente el diagnóstico de taponamiento
cardiaco. En el ecocardiograma, la com- RECOMENDACIONES PARA LA PRÁCTICA
presión diastólica de la aurícula derecha o del DE TAC TORÁCICA O RNM EN LA PATOLO-
ventrículo derecho son diagnósticos con alta GÍA PERICÁRDICA:
sensibilidad y especificidad. En el Doppler se
aprecia aumento de la velocidad a través de Clase I:
las válvulas tricúspide y pulmonar en la inspira-
ción profunda, así como disminución de la Documentación de derrame pericárdico locali-
velocidad a través de la válvula mitral y aórtica zado o taponamiento localizado, especial-
en el mismo tiempo. mente en el postoperatorio de cirugía cardiaca.

RECOMENDACIONES PARA LA PRÁCTICA CATETERISMO CARDIACO


DEL ECOCARDIOGRAMA-DOPPLER
El taponamiento se define por la presencia de
Las indicaciones y niveles de evidencia se- igualación de la presión intrapericárdica con
rían los siguientes: la presión de llenado de las cavidades dere-
chas (presión auricular derecha o diastólica
Clase I de ventrículo derecho) en telediástole. Se con-
sidera que hay igualación cuando la presión
1. Diagnóstico y cuantificación del derrame derecha no supera en más de 2 mmHg la pre-
pericárdico. sión intrapericárdica. A medida que aumenta
2. Seguimiento evolutivo del derrame peri- la severidad del taponamiento, se alcanza la
cárdico. presión diastólica ventricular izquierda y se
produce igualación entre la presión

490
CAPÍTULO XIV: TAPONAMIENTO CARDIACO

intrapericárdica y las presiones diastólicas del 2. Pericardiocentesis con control ecocardio-


ventrículo derecho y del ventrículo izquierdo. gráfico adicional al ECG. Se pueden hacer
pericardiocentesis muy completas y
La severidad del taponamiento se valora por exhaustivas, permitiendo la inserción de
la amplitud del pulso paradójico (debe ser igual catéteres intrapericárdicos en lugar de una
o superior a 12 mmHg), el porcentaje de su aguja o cánula. Tiene la ventaja de permi-
reducción tras la pericardiocentesis (superior tir que se elija la ruta de punción (transxi-
al 50%) y el aumento del gasto cardiaco tras foidea, subcostal, transtorácica) según la
la pericardiocentesis (superior al 10% o al distribución del derrame pericárdico.
20%). Por criterios hemodinámicos se consi-
derará: 3. Pericardiocentesis con control radiológico
y hemodinámico: puede llevarse a cabo en
1. Taponamiento ligero: cuando sólo exista la la unidad de cuidado intensivo (UCI) o en
igualación de las presiones de llenado y el departamento de hemodinamia. Permi-
las pericárdicas, asociado sólo a pulso pa- te controles hemodinámicos muy comple-
radójico, o sólo a mejoría del gasto cardía- tos, tanto para evaluar la situación del pa-
co >10%. ciente en cada momento como para valo-
rar la eficacia de la pericardiocentesis. Con
2. Taponamiento moderado: además de los facilidad permite dejar un catéter para dre-
criterios de igualación hay mejoría del gasto naje a más largo plazo o para la aplicación
cardíaco >10% tras la pericardiocentesis y de tratamientos intrapericárdicos.
criterios de pulso paradójico o tan sólo
mejoría del gasto cardíaco >20%. Rendimiento diagnóstico: El rendimiento diag-
nóstico etiológico de la pericardiocentesis en
3. Taponamiento severo: criterios de iguala- ausencia de taponamiento cardiaco clínico es
ción, asociado a mejoría del gasto cardiaco muy bajo (alrededor de un 5%), en presencia
>20% y a pulso paradójico. de taponamiento el rendimiento es mayor de
30%.

RECOMENDACIONES PARA LA PRÁCTICA Indicaciones para la práctica de pericardiocen-


DEL ESTUDIO HEMODINÁMICO: tesis:

Clase II b: Valoración de la severidad del ta- Clase I


ponamiento cardiaco. Habitualmente se pue- 1. Taponamiento cardíaco moderado o seve-
de establecer a través de otras exploraciones. ro diagnosticado por los criterios clínicos
clásicos, en presencia de un derrame
Pericardiocentesis: Se pueden describir pericárdico como mínimo moderado en el
varias técnicas: ecocardiograma.

1. Pericardiocentesis en la cabecera del pa- Clase IIA


ciente con la simple monitorización por 1. Taponamiento cardíaco moderado en pa-
ECG y sin monitorización hemodinámica cientes con alta probabilidad de tener una
invasora. Se lleva a cabo sólo con una agu- pericarditis idiopática. En ocasiones el cua-
ja o con una cánula. La vía de abordaje dro de taponamiento puede mejorar con
más usada es la subxifoidea. tratamiento médico.

491
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Derrame pericárdico crónico masivo (espa- Clase III


cios libres de ecos en los sacos anterior y 1. Derrame pericárdico ligero o moderado sin
posterior >20 mm). ningún dato de taponamiento.
2. Derrame pericárdico moderado con colap-
Clase IIB so de aurícula o ventrículo izquierdo pero
1. Taponamiento cardíaco ligero en pacien- sin ningún dato clínico de taponamiento.
tes con alta probabilidad de tener una
pericarditis idiopática. PERICARDIOSCOPIA

2. Derrame pericárdico importante sin ningu- Se lleva a cabo con un mediastinoscopio rígi-
na evidencia de taponamiento. do que se introduce en la cavidad pericárdica
mediante una fenestración quirúrgica, en ge-
Clase III neral por vía epigástrica-xifoidea.
1. Derrame pericárdico ligero o moderado sin
ningún dato de taponamiento.
2. Derrame pericárdico moderado con colap-
TRATAMIENTO
so de aurícula o ventrículo izquierdo pero
sin ningún dato clínico de taponamiento. Los pacientes con taponamiento cardíaco clí-
nico severo deben ser sometidos a drenaje
pericárdico urgente (nivel de recomendación
BIOPSIA PERICÁRDICA clase I). La elección entre pericardiocentesis
y drenaje quirúrgico depende en gran medida
El rendimiento en cuanto a diagnóstico etioló- de la experiencia del cardiólogo y de la disponi-
gico es alrededor de 5% cuando se practica bilidad de equipo quirúrgico.
solo con finalidad diagnóstica, mientras que
es más alto, alrededor de 35%, en enfermos La pericardiocentesis soluciona el taponamien-
con taponamiento. to en un porcentaje importante de enfermos
(alrededor de 60 a 70%) y aporta información
Recomendaciones para la práctica de biop- en cuanto al diagnóstico etiológico en 30% de
sia pericárdica con drenaje: Habitualmente los casos, aproximadamente. Cuando el
el drenaje y la toma de biopsia se hacen por taponamiento no se soluciona con la pericar-
vía subxifoidea. Las indicaciones y niveles de diocentesis o recidiva tras ella, hay que practi-
evidencia serían los siguientes: car un drenaje quirúrgico. El drenaje quirúrgi-
co con toma de biopsia, por otra parte, puede
Clase I ser el procedimiento de elección cuando se
• Taponamiento cardíaco severo, no resuel- sospecha una etiología específica (como la
to con la pericardiocentesis o recidivante tuberculosis), ya que permite el estudio
tras la misma. histológico del pericardio (nivel de recomen-
dación clase IIA).
Clase IIA
• Estudio histológico y bacteriológico del te-
jido pericárdico y del líquido pericárdico en INDICACIONES Y TÉCNICAS QUIRÚRGICAS
pacientes con signos clínicos persistentes
tres semanas después de iniciado el trata- Las indicaciones de las diferentes técnicas
miento médico correcto. quirúrgicas en la patología pericárdica son

492
CAPÍTULO XIV: TAPONAMIENTO CARDIACO

condicionadas por la patología de base, la do. De esta forma el líquido originado en el


repercusión hemodinámica, el rendimiento en pericardio va drenando a la cavidad pleural,
cuanto al diagnóstico etiológico y las posibili- donde puede ser reabsorbido o evacuado con
dades evolutivas. Las técnicas quirúrgicas toracocentesis repetidas. La comunicación
son: entre pericardio y pleura debe ser amplia pues,
de lo contrario, el propio corazón y el pulmón
• Drenaje pericárdico por vía subxifoidea. tenderían a taponar el defecto y la ventana
• Ventana pericárdica. dejaría de funcionar.
• Pericardiectomía por esternotomía media
con ayuda de circulación extracorpórea o
sin ella. Pericardiectomía

Drenaje pericárdico por vía subxifoidea. El Técnica


drenaje pericárdico quirúrgico permite la toma 1. Por esternotomía media. Actualmente es
de tejido pericárdico para investigación bacte- el abordaje más empleado.
riológica e histológica. El procedimiento se pue- 2. Por esternotomía media con ayuda de cir-
de realizar con finalidad diagnóstica, terapéu- culación extracorpórea: poco usada pero
tica o ambas. Con anestesia local o general se debe contemplarse en los casos en que se
practica incisión en la línea media por debajo pretenda practicar pericardiectomía total.
de la apófisis xifoides. Se abre la línea alba y
se levanta la apófisis xifoides. El pericardio apa- Recomendaciones para la práctica de la
rece turgente y abultado por el líquido pericár- pericardiectomía: la indicación y nivel de
dico. Se abre el pericardio bajo visión directa, evidencia es:
se drena y se toma un fragmento de tejido
pericárdico para estudio. Se coloca un tubo de Clase I:
drenaje que se conecta a un sistema de aspi- • Hemopericardio por traumatismo torácico
ración continua, el drenaje se mantiene mien- o hematoma pericárdico iatrogénico.
tras es productivo (más de 100 mL en 24 h).

Ventana pericárdica. El propósito de la ven- LECTURAS RECOMENDADAS


tana pericárdica es drenar el líquido pericár-
1. Asher CR, Klein AL.Diastolic heart failure: restric-
dico dentro de la cavidad pleural o peritoneal;
tive cardiomyopathy, constrictive pericarditis, and
puede ser más efectiva que el drenaje subxi- cardiac tamponade: clinical and echocardiographic
foideo y se puede considerar como alternati- evaluation.Cardiol Rev 2002; 10:218-229.
va terapéutica en casos de derrames repeti- 2. Braunwald E. Heart disease. 6th edition. Saundres.
dos en los que no se puede actuar sobre la Philadelphia, 2001.
causa etiológica (neoplasias, derrames seve- 3. Jairat UC, Benotti JR, Spondic DH. Cardiac
ros idiopáticos). Se practica incisión sobre la tamponade masking pulmonary embolism. Clin
parte anterolateral del quinto espacio inter- Cardiol 2001; 24:485-486.
4. Sagristá J, Almenar L, Ferrer J A. Guías de prác-
costal izquierdo. Tras abrir los músculos inter-
tica clínica de la Sociedad Española de Cardio-
costales aparece el pericardio y la pleura iz- logía en patología pericárdica. Rev Esp Cardiol
quierda. Se realiza incisión amplia en el peri- 2000; 53: 394-412.
cardio drenando la cavidad pericárdica. A con- 5. Shabetai R. Diseases of the pericardium. En: The
tinuación se conecta esta incisión con otra en Heart. Editado por JW Hurts. Mc Graw-Hill. New
la pleura, por delante del nervio frénico izquier- York, 1994.

493
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

6. Slater J, Brown RJ, Antonelli TA, et al. Cardiogenic cardiogenic shock?. J Am Coll Cardiol 2000;
shock due to cardiac free-wall rupture or 36:1117S-1122S.
tamponade after acute myocardial infarction: a 7. Zhang S, Kerins DM, Byrd BF. Doppler Echocar-
report from the SHOCK Trial Registry. Should we diography in cardiac tamponade and constrictive
emergently revascularize occluded coronaries for pericarditis. Echocardiography 1994; 11: 507-521.

494
CAPÍTULO XV: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA DEL MIEMBRO SUPERIOR

CAPÍTULO XV

Trombosis venosa profunda del miembro superior


(síndrome de paget schroetter)

Fernando Guzmán, MD
Jefe Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a trombosis venosa profunda del miembro


superior es una entidad poco frecuente
que ha venido mostrando un aumento en su
de Swan-Ganz), marcapasos, accesos veno-
sos para quimioterapia o nutrición parenteral.

incidencia a partir de los años 70, cuando em-


pezó el uso generalizado de los catéteres ETIOLOGÍA Y CLASIFICACÍON
venosos centrales.
El espectro etiológico ha llevado a clasificar
la enfermedad en dos grandes grupos: trom-
EPIDEMIOLOGÍA bosis primaria y trombosis secundaria.

El síndrome de Paget-Schroetter es causan- La trombosis primaria es la misma idiopática,


te de 1-3% de las tromboflebitis profundas de espontánea, de esfuerzo o traumática, la cual
las extremidades. se presenta generalmente en el brazo domi-
nante.
Aunque la tromboflebitis es más frecuentes
en los miembros inferiores, debido a razones Al parecer es el producto de pequeños trauma-
anatómicas como la ausencia de plejos veno- tismos repetidos, asociados con algún ejerci-
sos como el de la pantorrilla, la diferencia com- cio fuerte practicado con el miembro afectado
parativa de presiones entre los dos sistemas en las horas precedentes al evento trombótico.
y la mayor actividad fibrinolítica presente en
los brazos, este cuadro a nivel de los miem- Lo anterior se ve favorecido por la compresión
bros superiores puede revestir especial gra- de la vena subclavia y axilar con las estructu-
vedad por la incapacidad potencial a la que ras osteo-tendinosas de la salida del tórax,
puede llevar y las consecuencias sistémicas como el ligamento costo-coracoideo, el
que desencadena cuando no se diagnostica músculo subclavio, la clavícula y la primera
a tiempo. costilla.

El aumento en la incidencia de la enfermedad La trombosis secundaria es aquella en la que


se debe al creciente uso de catéteres venosos se encuentra un evento reconocido que pre-
centrales para monitoría de pacientes (catéter dispone a la trombosis, tal como los estados

495
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de hipercoagulabilidad. Existen además, otros Aunque la sintomatología es muy similar en


factores que producen algún tipo de obstruc- las formas primaria y secundaria, las caracte-
ción de la vena axilo-subclavia, como la pre- rísticas de cada una son muy diferentes.
sencia de catéteres venosos centrales, tumo-
res y el trauma, entre otros. Es así como la forma primaria se caracteriza
por ser de predominio del brazo dominante,
Los catéteres centrales merecen especial mientras que la forma secundaria no tiene una
mención debido a su gran popularidad. Es am- franca predilección por ninguna extremidad.
pliamente reconocido el poder trombogénico
de los cuerpos extraños intravasculares. A este En la primaria generalmente existe el antece-
respecto, el material de construcción del ca- dente de algún esfuerzo hecho con la extremi-
téter tiene importantes implicaciones: los dad afectada los días anteriores, o la práctica
catéteres de cloruro de polivinilo (PVC) tienen de algún deporte o actividad que obligue a
gran poder trombogénico; los de poliuretano movimientos de abducción y supinación de la
una trombogenicidad intermedia y los siliconi- extremidad.
zados la menor capacidad de generar trombos
intravasculares. La forma secundaria depende de factores
como el sitio escogido para el catéter central,
Por otro lado, el diámetro del catéter (mayor el sitio de trauma o del tumor.
diámetro, mayor trombogenicidad), la duración
de la cateterización y el contenido de la infu- El lado izquierdo podría estar afectado con
sión también son importantes. Las infusiones mayor frecuencia por varias razones anatómi-
de bajo pH y alta osmolaridad son de mayor cas como la mayor longitud del tronco bra-
riesgo trombogénico. quiocefálico izquierdo, su posición más hori-
zontal y su vecindad con otras estructuras que
pueden comprimirlo como la carótida derecha,
DIAGNÓSTICO el esternón y la clavícula izquierda, situación
que no comparte el tronco braquiocefálico
MANIFESTACIONES CLÍNICAS derecho.

Las manifestaciones clínicas más frecuentes A pesar de que en muchos casos la presenta-
son: ción clínica puede ser diagnosticada, siempre
• Dolor del miembro superior. se requiere de su confirmación por algún mé-
• Dilatación venosa. todo diagnóstico existente ya sea invasivo o
• Edema del miembro. no invasivo.
• Fiebre Cianosis del antebrazo y la mano.
• Ingurgitación yugular Dolor del seno.
• Dilatación de venas del seno. EXÁMENES DIAGNÓSTICOS
La sintomatología típica de la enfermedad es La flebografía es el examen considerado como
la presentación aguda de edema de la totali- el patrón de oro en el diagnóstico de la trom-
dad de la extremidad, acompañado de dolor bosis venosa del miembro superior. Este exa-
moderado o severo y sensación gravativa en men no sólo demuestra el trombo venoso, sino
su extensión. que ayuda a confirmar la permeabilidad de la
circulación colateral y la presencia de estruc-

496
CAPÍTULO XV: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA DEL MIEMBRO SUPERIOR

turas en la salida del tórax que pueden influir comenzó a pensar en otras alternativas tera-
en la presentación de la enfermedad. péuticas.

La flebografía no es un procedimiento inocuo La anticoagulación con heparina ha sido el


y acarrea riesgos como el perpetuar la trombo- tratamiento convencional y debe iniciarse tem-
sis por el medio de contraste, el potencial ries- prano en el curso de la enfermedad, pues evi-
go de las reacciones alérgicas y la falla renal. ta la expansión y propagación del trombo, así
Además, no siempre es posible realizarlo por como también disminuye la ocurrencia de
los problemas técnicos que tiene que canali- tromboembolismo pulmonar.
zar una vena en una extremidad edematizada.
Desafortunadamente, no todos los pacientes
Una variante de esta técnica, la venografía por responden adecuadamente al esquema clá-
sustracción digital, parece ser una mejor alter- sico de anticoagulación de siete días de hepa-
nativa ya que requiere el uso de mucho me- rina, seguido de warfarina para mantener pro-
nos medio de contraste. longados los tiempos de coagulación.

Los estudios de Doppler, a pesar de ser bue- Otras alternativas en el estado agudo son la
nos métodos diagnósticos, pueden arrojar fal- estreptoquinasa y la uroquinasa, agentes trom-
sos negativos debido a la circulación colateral bolíticos que pueden ser utilizados en forma
existente alrededor de la región del hombro. sistémica o local en el miembro afectado don-
de se obtienen los mejores resultados debido
El Dúplex Scanning posee una mejor resolu- a la mayor concentración de agente trombo-
ción y permite evaluar las estructuras arteria- lítico en el área del trombo. Algunos prefieren
les y venosas e identificar los posibles trom- el uso rutinario de uroquinasa como agente de
bos. Su especificidad diagnóstica puede lle- primera elección debido a que puede evitar los
gar a 97%. problemas de resistencia a la estreptoquinasa.

La flebografía con radioisótopos, se usa con El tratamiento quirúrgico de la enfermedad


menor frecuencia por tener una baja especifi- también ha sido propuesto. Básicamente ha
cidad. consistido en la práctica de trombectomías,
las cuales no han tenido mucho éxito debido
a que se produce aparición de retrombosis rá-
TRATAMIENTO pidamente.

Inicialmente cuando se creía que la enferme- El único tratamiento quirúrgico aceptado es


dad tenía un curso benigno, el tratamiento la resección de la primera costilla o de los ele-
consistía en reposo de la extremidad y el man- mentos que causan compresión en la salida
tenimiento de ésta en posición elevada. del tórax en los casos de enfermedad primaria.

Cuando se empezaron a reportar con más fre- Es obvio que en los casos de enfermedad
cuencia las complicaciones más serias de la secundaria el eliminar la causa directa de la
enfermedad, como el tromboembolismo pul- trombosis es de gran ayuda en el tratamiento
monar y las incapacidades postrombóticas, se para evitar que se perpetúe la trombosis.

497
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COMPLICACIONES Schroetter syndrome in athletes. Ann Vasc Surg


2001; 15:212-218.
La secuela más frecuente es el síndrome post- 3. Heron E, Lozinguez O, Alhenc-Gelas M, et al.
Hypercoagulable states in primary upper-extremity
flebítico, caracterizado por dolor y edema que
deep vein thrombosis. Arch Intern Med 2000;
se exacerban con el ejercicio de la extremi- 160:382-386.
dad afectada. 4. Hingorani A, Ascher E, Yorkovich W, et al. Upper
extremity deep venous thrombosis: an underrecog-
Este tipo de secuelas se puede encontrar en nized manifestation of a hypercoagulable state.
70-90% de los pacientes que presentaron la Ann Vasc Surg. 2000; 14:421-426.
enfermedad aguda según trabajos recientes, 5. Kreienberg PB, Chang BB, Darling RC 3rd, et al.
particularmente en quienes tenían la forma Long-term results in patients treated with throm-
bolysis, thoracic inlet decompression, and subcla-
primaria de la enfermedad.
vian vein stenting for Paget-Schroetter syndrome.
J Vasc Surg 2001; 33(2 Suppl):S100-S105.
El tromboembolismo pulmonar es sin duda la 6. Leebeek FW, Stadhouders NA, van Stein D, et al.
más peligrosa de las complicaciones y su in- Hypercoagulability states in upper-extremity deep
cidencia según las series es de 2,5%, 12% y venous thrombosis. Am J Hematol 2001; 67:15-
hasta 35%. 19.
7. Lokanathan R, Salvian AJ, Chen JC, et al.
Outcome after thrombolysis and selective thoracic
outlet decompression for primary axillary vein
LECTURAS RECOMENDADAS
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results of venous revascularization for Paget- Thorac Surg 2000; 69:1663-1668.

498
CAPÍTULO XVI: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA (TVP)

CAPÍTULO XVI

Trombosis venosa profunda (TVP)

Luis Ignacio Tobón Acosta, MD


Jefe, Sección de Cirugía Vascular Periférica
Universidad de Antioquia,
Hospital Universitario San Vicente de Paúl
Medellín

L a trombosis venosa profunda (TVP) hace


parte del complejo de enfermedad trombo-
embólica venosa que incluye a esta entidad y
anticoagulantes o exceso de inductores de
trombosis.

al tromboembolismo pulmonar (TEP). La TVP de los miembros inferiores usualmente


se inicia en las piernas, en los repliegues y cús-
La TVP afecta aproximadamente dos millones pides valvulares, debido a que en estos sitios
de personas en los Estados Unidos por año, hay ambiente reológico propicio, la velocidad de
se considera que la incidencia es de 1-2 por la sangre es menor y la corriente local presenta
mil habitantes por año. Depende de la edad rotaciones elipsoidales y casi estáticas, lo cual
de la persona, en niños es muy rara y en ma- favorece que se encuentren más factores de
yores de 40 años su frecuencia aumenta en coagulación y procoagulantes sobre el endotelio.
forma significativa. Por cada persona con TVP
confirmada, el diagnóstico se ha excluido en Después de formado, el trombo se propaga
otras tres. por yuxtaposición en forma proximal, pero tam-
bién en forma distal al disminuir la velocidad
El TEP la mayoría de las veces es secundario del flujo. La parte más peligrosa del trombo
a la TVP de los miembros inferiores (aproxi- es la más reciente, la que se encuentra en su
madamente 90%). parte cefálica, su capacidad de desprenderse
y producir TEP.

FISIOPATOLOGÍA Las venas gemelares y las sóleas son los si-


tios en donde con mayor frecuencia se origi-
En 1845 Rudolf Virchow postuló que en la gé- na la TVP. Parece que allí el endotelio posee
nesis de la trombosis participaban tres meca- menor cantidad de fibrinolíticos y es el lugar
nismos que favorecían su desarrollo: hiper- de menor velocidad de la sangre.
coagulabilidad, estasis y trauma endotelial.
Los trombos son ricos en fibrina, glóbulos rojos Después de que el trombo se asienta sobre el
y en factores de la coagulación y escasos en seno valvular las corrientes de flujo cambian
plaquetas. localmente, disminuye el área de la vena, se
produce estenosis y mayor fuerza de roza-
Para que se forme trombo, se requiere la pér- miento, lo cual disminuye la velocidad distal
dida parcial de los mecanismos protectores (caudal) y permite el crecimiento del trombo.

499
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El paso siguiente a la oclusión es la adheren- En los casos severos, aunque con poca fre-
cia. En éste participan en forma activa los cuencia, ocurre la flegmasia cerulea dolens
leucocitos que deshidratan el trombo, después en la cual la extremidad está severamente
de haber desnaturalizado y estabilizado los edematizada, la cianosis es marcada, hay
enlaces de fibrina. Este proceso tarda entre mucho dolor, se presentan flictenas y puede
cinco y diez días, tiempo en el cual es más llegar hasta la gangrena de la extremidad. En
factible que el trombo se fragmente y se pro- estos casos además de la obstrucción venosa
duzca embolismo. hay compromiso en el retorno linfático.

A la adherencia le sigue la retracción, ésta Es muy importante identificar los factores de


ocurre a partir de la segunda semana y la dura- riesgo en toda persona para adoptar medidas
ción es variable. El proceso permite el paso profilácticas.
de flujo a colaterales vecinas, pero en él que-
dan envueltas las valvas, que se fijan a la
pared de la vena y se hacen insuficientes. MÉTODOS DE DIAGNÓSTICO
El tiempo de la recanalización es variable y Actualmente el método más aceptado para el
depende de la localización y de la extensión diagnóstico de la TVP es el ultrasonido
del trombo. La TVP distal se recanaliza en Doppler color, el cual tiene alta sensibilidad y
100% aproximadamente en un mes; la que especificidad en trombosis proximales (seg-
está distal al ligamento inguinal tarda entre mento ilíaco,femoral común, femoral superfi-
45-90 días; la más proximal (iliofemoral) pue- cial y poplíteo). Para el diagnóstico de la trom-
de tardar hasta seis meses o no recanalizarse, bosis de la pantorrilla, este método tiene baja
lo cual ocurre aproximadamente en 20% de sensibilidad. Cuando existen dudas sobre el
los pacientes. diagnóstico y el ultrasonido no las disipa, se
puede recurrir a la venografía; sin embargo,
Al producirse la TVP, disminuye el retorno este es un estudio invasor y puede producir
venoso de la extremidad, con acumulación de reacciones tóxicas por el medio de contraste.
líquido y aumento de la presión en el espacio
intersticial, como consecuencia se produce La tomografía axial computadorizada (TAC)
edema, además, la misma hipertensión veno- es útil para diagnosticar trombosis venosa
sa produce dilatación de las venas, el reman- pélvica, enfermedad ésta de muy difícil diag-
so de sangre hace que se extraiga más oxí- nóstico, pero que se debe tratar por el riesgo
geno de los tejidos, y se produce la cianosis. que tiene de desarrollar TEP.

CUADRO CLÍNICO TRATAMIENTO


Depende del sitio en donde se produzca la Ante sospecha clínica confiable (dolor súbito
obstrucción. En la parte distal se encuentra de la extremidad acompañado por edema, in-
edema, aumento del diámetro en la extremi- gurgitación venosa, cianosis de la extremidad
dad, dolor, ingurgitación venosa y cianosis de y ausencia de fiebre significativa), se puede
la extremidad, lo cual se aprecia mejor en la iniciar el tratamiento. Luego se solicita el exa-
región plantar y cuando el paciente está sen- men (Duplex color) para documentar el diag-
tado en el borde de la cama. nóstico. Si el estudio demostró compresión

500
CAPÍTULO XVI: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA (TVP)

extrínseca y no hay trombosis, se suspende 2. Antes de iniciar el tratamiento, obtener


la anticoagulación, pero si se demostró se muestra de sangre para hemograma com-
pasa a: pleto, recuento de plaquetas, PTTa y TP
(tiempo de protrombina) basales. Hasta
1. Heparina no fraccionada (HNF), la cual se donde sea posible, no se debe iniciar
debe administrar de acuerdo con el peso anticoagulación sin estos exámenes.
del paciente, 80 unidades por kg, por vía
intravenosa como dosis de ataque, segui- 3. De acuerdo con el valor del PTTa, seguir la
da por dosis variable entre 15-25 unidades anticoagulación. El PTTa se debe medir el
por kg por hora, dependiendo de la prolon- primer día cada sies horas y luego una vez
gación o no del PTTa (tiempo de trom- al día, hasta obtener la prolongación de él a
boplastina parcial activado). una relación entre 1,5 y 2,0 del control basal
del paciente. La dosis de heparina se ajusta
de acuerdo con el PTTa. Véase Tabla No. 2.

TABLA No. 1. FACTORES DE RIESGO PARA TVP

Hereditarios
• El más frecuente en la población es el factor V Leiden. Cuando está presente y la persona ingiere anovulatorios
orales o terapia estrogénica, el riesgo de trombosis aumenta en forma muy significativa.
• El gen que codifica la protrombina (G20210A).
• Las deficiencias de los anticoagulantes naturales como antitrombina III, proteína C y proteína S de la coagulación.
• Alteraciones en el gen que codifica la metilen-tetrahidrofolatorreductasa.
• Disfrinogenemia.

Adquiridos
• Reposo prolongado.
• Síndrome antifosfolípido.
• Trauma.
• Cirugía abdominal, torácica, ortopédica, urológica, pélvica.
• Enfermedad del SNC invalidante.
• Paraplejia.
• Resistencia a la proteína C activada.
• Embarazo.
• Parto, aborto, puerperio.
• Inmovilización de miembros inferiores.
• Viajes largos en avión, mayores de ocho horas.
• Insuficiencia cardiaca congestiva.
• TVP previa.
• Aumento de inactivadores de la fibrinolisis.
• Enfermedades mieloproliferativas.
• Cáncer.
• Yesos o férulas, en miembros inferiores por tiempo mayor a siete días.
• Uso de anovulatorios orales (en este caso, si se va a someter a la paciente a cirugía electiva, se deben suspender
por lo menos dos meses antes).

501
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA No. 2. ADMINISTRACIÓN DE HEPARINA SEGÚN EL PTTA.


HEPARINA IV DOSIFICADA POR KILO DE PESO CORPORAL

TPTa en segundos Relación Cambio dosis Acción adicional Próximo TPT


Pt/control UI/k/h
< 35 seg <1,2 Adicionar 4 bolo de 80 UI/kg 6 horas
35 – 45 seg 1-2 – 1,5 Adicionar 2 bolo de 40 UI/kg 6 horas
46 - 70 seg 1.5 - 2.3 NO cambiar 0 6 horas
71 - 90 seg 2,3 – 3,0 Disminuir 2 0 6 horas
>90 seg >3,0 Disminuir 3 Parar infusión 6 horas

Adaptada de: Ansell J, Hirsh J, Aderson DR, et al. Managing oral anticoagulant therapy. Chest 2001; 119:225S-385S.

Para el ajuste se debe contar con laboratorio En la paciente embarazada, se recomienda


confiable y que pueda realizar estos estudios utilizar heparina de bajo peso molecular
en el momento que se necesitan. (HBPM), 1 mg/kg de peso cada 12 horas. En
estos casos, la utilización de la HNF puede
Muy buena alternativa es utilizar heparinas de traer dificultades debido a que en algunas pa-
bajo peso molecular, ya que no son necesarios cientes durante el embarazo, los niveles ele-
los controles de laboratorio, la dosis se admi- vados del factor VIII pueden dar “falsa resis-
nistra de acuerdo con el peso del paciente, tencia a la heparina”, si esta alteración no se
son de más cómoda y fácil administración advierte se podría equivocadamente aumen-
(subcutánea). La más utilizada es la enoxa- tar la dosis de heparina, con las consecuen-
parina cuya dosis es: 1 mg/kg cada 12 horas. cias que puede producir el exceso de antico-
También se dispone en nuestro medio de dal- agulación a la paciente.
teparina, en iguales dosis que la anterior, y
nadroparina dosificada en unidades por kg Si no es posible utilizar las HBPM, una alter-
(90-100U/kg). nativa puede ser la HNF, de acuerdo con el
peso de la paciente(15-25 u/kg/h, repartida en
Inmediatamente después de iniciar la HNF, se dos o tres dosis, subcutáneas) pero controla-
comienza la warfarina sin necesidad de dosis da por el tiempo de trombina, que mide en
de carga, usualmente 5 mg diarios; se debe forma confiable la anticoagulación.
realizar tiempo de protrombina e INR 72 horas
después, efectuar controles diarios hasta Trombolisis: hasta el momento no hay estu-
cuando se obtengan en dos días consecuti- dios grandes controlados, aleatorizados, que
vos valores de INR entre 2,5 y 3,5; realizar permitan recomendar en forma rutinaria la
luego controles periódicos en forma ambulato- trombolisis en el paciente con TVP. La única
ria. El tiempo de tratamiento depende de la indicación clara está en los casos de flegmasia
entidad que causó la trombosis y de la locali- cerulea dolens.
zación de ella.
Podría utilizarse en pacientes menores de 30
Cuando se utiliza la heparina por tiempos cor- años con trombosis iliofemoral extensa, con
tos (menos de una semana), es poco probable el ánimo de prevenir el desarrollo del síndro-
que aparezca trombocitopenia de tipo inmune. me de insuficiencia venosa crónica, tan

502
CAPÍTULO XVI: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA (TVP)

incapacitante a largo plazo. La forma de utili- Medidas no farmacológicas: en todo pacien-


zación sería por vía venosa, impregnando en te, cuando cese el dolor de la extremidad, se
forma directa el trombo con el trombolítico. En debe colocar un vendaje elástico compresivo
nuestro medio los medicamentos de los cua- con gradiente de presión o confeccionarle
les se dispone son: estreptokinasa y r-tpa, sólo media sobre medida con gradiente de presión.
para utilizar en hospitales de tercer nivel. Debe utilizarse en forma indefinida o hasta
cuando se demuestre que no quedó insuficien-
Los pacientes con TVP de los segmentos dis- cia venosa residual. No se requiere que lle-
tales al ligamento inguinal (femoral superficial gue por encima de la rodilla.
y poplítea), pueden tratarse hospitalizados por
espacio de uno o dos días y darlos de alta con El paciente debe permanecer en reposo sólo
tratamiento con heparina de bajo peso mole- por espacio de 24-48 horas; es suficiente para
cular y warfarina. Sin embargo es necesario que el trombo se organice, se adhiera a la
asegurar que se puedan realizar en forma am- pared y no se desprenda, si el paciente está
bulatoria los estudios de tiempo de protrombina recibiendo las dosis adecuadas de heparina.
e INR para que el tratamiento sea adecuado. El paciente aproximadamente entre cinco y
siete días, debe darse de alta.
En el tratamiento de la TVP por debajo de la
poplítea no hay consenso con respecto a la
anticoagulación; se recomienda anticoagula- DURACIÓN DEL TRATAMIENTO
ción, cuando se demuestra trombosis de más
de dos grupos venosos, con la salvedad de Depende de la causa desencadenante o aso-
que el diagnóstico de la TVP por medio del ciada. Si es transitoria, basta el tratamiento
ultrasonido en estos segmentos venosos es durante 12 semanas; cuando es idiopática de-
difícil. be recibir tratamiento mínimo un año y si la
causa persiste el tratamiento se realiza en for-
Trombectomía: la trombectomía con fístula ma indefinida, como ocurre con los pacientes
arteriovenosa fue sugerida hace dos décadas con trombosis asociada a síndrome antifos-
como alternativa terapéutica en el paciente folípido o a cáncer. Es indefinida en los casos
con trombosis iliofemoral. Ocurre algo similar de recurrencia.
a lo que sucede con la terapia trombolítica,
debido a que no hay evidencia clínica y epide- No está demostrado que los pacientes con
miológica que la avale. trastornos genéticos como presencia de fac-
tor V Leiden en la forma heterocigótica o alte-
Se considera útil en casos desesperados de ración en el gen de la protrombina G 20210 a,
flegmasia curúlea dolens o cuando se presen- deban recibir tratamiento por más de un año.
ta obstrucción masiva al retorno venoso de la
extremidad. La realización de fístula permite
evitar la recurrencia o retrombosis precoz. PROFILAXIS
Filtro en la vena cava inferior: sólo indicado La medida fundamental contra la TVP es pre-
cuando existe contraindicación absoluta para venir que se presente; por tanto se deben iden-
la anticoagulación y cuando a pesar de estar tificar los factores de riesgo en cada paciente
anticoagulado el paciente en forma adecua- y utilizar las medidas profilácticas.
da, se presenta embolismo recurrente.

503
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El método más aceptado es el uso de las do el paciente esté deambulando y apoye bien
HBPM. El mayor número de estudios se ha la extremidad. Por tanto esta profilaxis debe
realizado con enoxaparina. La dosis recomen- extenderse hasta uno o dos meses; en estos
dada es de 40 mg subcutáneos antes de la casos después de una a dos semanas puede
cirugía y continuarla durante el tiempo que pasarse de las HBPM a la warfarina, pero es
dure el estado de inmovilización. necesario tener presentes las interacciones de
la warfarina con gran cantidad de medicamen-
Las personas mayores de 40 años que van a tos que prolongan el INR, por ejemplo: algu-
ser sometidas a cirugía mayor, cirugía ortopé- nos antiinflamatorios no esteroideos, dipirona,
dica o ginecológica, tienen aumentado en for- antibióticos tipo trimetoprím-sulfa, cefalospori-
ma significativa el riesgo de TVP, por tanto en nas de primera, segunda y tercera generación,
este grupo de pacientes se debe realizar pro- macrólidos, metronidazol, antiarrítmicos, etc.
filaxis “enérgica”.
En los casos en los cuales esté contraindicada
Si no hay contraindicación, el medicamento la profilaxis con anticoagulantes tipo HBPM,
recomendado es enoxaparina, pero tanto la aunque no con tanta seguridad, puede utilizar-
nadroparina como la dalteparina sódica, cum- se la compresión neumática intermitente, por
plen igual función. La dosis recomendada es ejemplo en los pacientes que van a ser some-
40 mg subcutáneos una vez al día antes de la tidos a cirugía en el sistema nervioso central.
cirugía; hay quienes recomiendan utilizarla
inmediatamente después de la cirugía, princi- A las pacientes que están en anticoncepción
palmente en pacientes con cirugía ortopédica hormonal o terapia de reemplazo estrogénico,
en los cuales el tratamiento con heparina pue- se les debe recomendar la suspensión de ellas
de aumentar el sangrado; en estos pacientes dos meses antes, cuando se van a someter a
especiales y en cirugía de rodilla y cadera cirugía. Las pacientes que tienen resistencia
puede prologarse el tratamiento hasta cuan- a la proteína C activada o factor V Leiden, no
deben recibir este tipo de terapia.

TABLA 3. RIESGO DE ETEV

RIESGO % Evento tromboembólico


TV TV EP clínico EP fatal
Pantorrilla Proximal
Bajo 2 0,4 0,2 0,002
Cx menor, <40 años, sin FR.

Moderado 10-20 2-4 1-2 0,1-0,4


> 60A, cualquier cirugía sin FR.
< 40A, cirugía mayor, sin FR, o cirugía menor y FR.

Alto 20-40 4-8 2-4 0,4-1,0


> 60 años, cirugía mayor, no FR.
40-60 años, cirugía mayor con FR.
Infarto miocardio.
Enfermedades médicas con FR.

504
CAPÍTULO XVI: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA (TVP)

RIESGO % Evento tromboembólico


TV TV EP clínico EP fatal
Pantorrilla Proximal
Muy alto 40-80 10-20 4-10 1-5
Cirugía mayor, en >40 años, TEV previo.
Enfermedad maligna,
Estado hipercoagulable.
Cirugía ortopédica mayor en MI, fractura de
cadera, ECV, trauma múltiple, lesión
médula espinal, >40 años.

EP: embolismo pulmonar TEV: enfermedad tromboembólica venosa


MI: miembros inferiores
FR: factor de riesgo TV: trombosis venosa profunda

TABLA 4. PREVENCIÓN DEL TROMBOEMBOLISMO VENOSO

CARACTERÍSTICAS DEL PACIENTE RECOMENDACIÓN


Cirugía general, bajo riesgo. Deambulación temprana.
Cirugía general, riesgo moderado. HBPM, dosis bajas.
HNF.
CNI.
Cirugía general, riesgo alto. HBPM, dosis mayor.
HNF.
Cirugía general riesgo más alto, tendencia a Alternativa CNI.
hematoma a infección de la herida.
Cirugía general de muy alto riesgo y— HNF, bajas dosis con CNI.
múltiples FR. HBPM con CNI.
Cirugía general de muy alto riesgo, seleccionadas. Warfarina preoperatoria (INR 1.5-2,0).
Cirugía de reemplazo total de cadera. HBPM: 12-24 h después de cirugía.
Warfarina: antes de cirugía. Fondaparinux
HNF: ajustada preoperatoria, más CNI.
Anticoagulación post cirugía mientras riesgo.
Cirugía de reemplazo total de rodilla. HBPM, warfarina, fondaparinux o CNI.
Cx fractura de cadera HBPM, fondaparinux.
Warfarina: preoperatoria o inmediatamente
después (INR = 2,0).
Cx ortopédica y alto riesgo Filtro VCI, sólo si no es posible otra modalidad
profiláctica, si contraindicados los anticoagulantes.
Neuro Cx intracraneana CNI, con o sin ellos medias de soporte.
HBPM o HNF, en casos seleccionados.
CNI y HBPM, en muy alto riesgo.
Filtro VCI, en muy alto riesgo.

505
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CARACTERÍSTICAS DEL PACIENTE RECOMENDACIÓN


Trauma agudo médula espinal CNI poco efectiva.
CNI más HBPM.
Filtro VCI, en muy alto riesgo.
Anticoagular durante la rehabilitación.
Trauma y FR identificable de TEV HBPM.
CNI si no es posible HBPM.
Si muy alto riesgo y profilaxis subóptima: tríplex
filtro VCI.
Infarto miocardio HBPM, HNF dosis plena.
CNI más medidas soporte si anticoagulantes.
Contraindicados.
ECV isquémica y parálisis de miembros inferiores HBPM, HNF dosis plena.
HNF.
CNI con medias de gradiente.
Condiciones médicas con Fr para TEV: infecciones HBPM.
severas, Guillain Barré, tétanos, neumonías, HNF.
inmovilización prolongada, plejìas
Catéteres en venas centrales Warfarina.
HBPM.
Catéteres epidurales HBPM, con cuidado, después de haberse colocado
el catéter y sin evidencia de sangrado.
Cx urológica y ginecológica HBPM.
CNI más medias con gradiente.

HBPM: heparinas de bajo peso molecular HNF: heparina no fraccionada


CNI: compresión neumática intermitente FR: factor de riesgo
ICC: insuficiencia cardiaca congestiva

Adaptado de: Ansell J, Hirsh J, Aderson DR, et al. Managing oral anticoagulant therapy. Chest 2001; 119:225S-385S.

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Baker W. Diagnosis of deep venous thrombosis 4. Gould M, Dembitzer A, Sanders G, et al. Low
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2. Bergasvist D, Agnelli G, et al. Duration of prophy- thrombosis. Ann Int Med 1999; 100:789-799.
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CAPÍTULO XVI: TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA (TVP)

8. Kaboli P, Henderson MC, White RH. DVT heparin in the treatment of patients with acute
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507
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVII

Disección aórtica

Fernando Vargas, MD
Jefe, Sección de Cirugía Cardiovascular
Fundación Santa Fe de Bogotá

Mabel Gómez, MD
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L as enfermedades cardiovasculares son la


principal causa de muerte en la mayoría
de los países desarrollados y también en los
Existen diferencias entre la patogénesis, pre-
sentación clínica y tratamiento de la disección
aórtica y la ruptura de los aneurismas aórticos,
que están en vía de desarrollo. Las enferme- por lo cual el termino “aneurisma disecante”
dades aórticas contribuyen con la mortalidad no debe ser utilizado. Las nuevas técnicas
cardiovascular más alta. imagenológicas de ecocardiografía transeso-
fágica, resonancia magnética y tomografía
La disección aórtica es la patología de la aor- axial computadorizada helicoidal, han permi-
ta con mayor potencial de desenlace fatal y la tido un diagnóstico más temprano y exacto de
causa más común de ruptura aórtica, aun ma- la patología de la aorta, aun en situaciones
yor que los aneurismas abdominales. de urgencia. A pesar de estos adelantos que
permiten tomar decisiones tempranas, la es-
La disección aórtica se origina en el sitio de trategia para el manejo de estos pacientes no
una ruptura intimal y luego se propaga distal- ha sido totalmente establecida y las guías de
mente. Alrededor del 95% de las rupturas ocu- manejo se basan fundamentalmente en las
rren en la aorta ascendente, distal a la válvu- recomendaciones de expertos. Cuando no se
la aórtica (Tipo A) o distal a la arteria subclavia logran el diagnóstico temprano y el tratamiento
izquierda (Tipo B). Tanto la presión arterial co- adecuado, la disección aórtica es una enfer-
mo la tasa de aceleración del flujo pulsátil son medad letal.
fundamentales en la propagación de la disec-
ción. Pero la disección puede permanecer li-
mitada a la aorta ascendente y al área valvular FISIOPATOLOGÍA
aórtica, especialmente si no hay presencia de
hipertensión o ésta ha sido controlada en for- ANATOMÍA NORMAL
ma adecuada.
La aorta se compone de tres capas: una in-
terna, llamada la íntima; la capa de la mitad, o

508
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

capa media; y una capa externa delgada, la ANATOMÍA PATOLÓGICA


adventicia. La aorta se divide anatómicamente
en aorta torácica y aorta abdominal. La aorta La división de la capa media de la aorta en su
torácica se subdivide en ascendente y descen- eje longitudinal por una columna disecante de
dente y la abdominal se subdivide en suprarre- sangre, caracteriza a la disección aórtica y
nal e infrarrenal. Las propiedades elásticas de puede extenderse a toda la longitud del vaso.
la aorta son cruciales para su función normal; El plano de disección a menudo sigue la gran
la elasticidad y distensibilidad de la aorta dis- curvatura de la aorta ascendente y su arco.
minuyen con la edad, pero estos cambios ocu- En la disección aórtica clásica, la falsa luz
rren también en adultos saludables. creada por este hematoma medial se comu-
nica con la luz verdadera a través de la ruptu-
La pérdida de la elasticidad y la distensibilidad ra intimal. Tales rupturas son típicamente úni-
aórtica probablemente son secundarias al in- cas y de orientación transversa.
cremento en la presión del pulso comúnmente
visto en el anciano. Este proceso es acelerado
en aquellas personas con hipertensión y/o ALTERACIONES DE LA PARED
hipercolesterolemia, e histológicamente se tra- DE LA AORTA
duce en fragmentación de la elastina con in-
cremento concomitante del colágeno que re- Todos los mecanismos que debiliten la pared
sulta en una relación colágeno elastina au- de la aorta, en particular la capa media, pro-
mentada, lo que contribuye a pérdida de la ducen un estrés marcado que a su vez indu-
distensibilidad fisiológica. ce dilatación aórtica, formación de aneurisma
y eventualmente disección o ruptura aórtica
(Figura1).

Figura 1. Diferentes etiologías de enfermedad aórtica que pueden resultar en disección aórtica, incluyen-
do regresión y progresión de la enfermedad.

509
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ENFERMEDADES HEREDITARIAS ENFERMEDAD DEGENERATIVA


Síndrome de Marfan: es un desorden auto- La hipertensión arterial es claramente un fac-
sómico dominante de tejido conectivo, con una tor de génesis en la disección aórtica. Una pre-
incidencia estimada de 1/5000. El síndrome sión arterial elevada o evidencia de su existen-
compromete varios sistemas: esquelético, cia, se halla hasta en 80% de los pacientes.
ocular, cardiovascular, pulmonar, piel, tegu- La tasa de expansión de la aorta en 10 años
mentos y dura y exhibe una amplia variabilidad es cerca de 1-2 mm. Factores que debilitan la
clínica. Un gran número de mutaciones han pared aórtica pueden llevar a la formación de
sido identificadas, particularmente en el gen un aneurisma. De acuerdo con la ley de La-
Fibrilina-1 (FBN-1). place, el estrés sobre la pared en una pared
delgada es directamente proporcional a la pre-
Síndrome de Ehler-Danlos: es un grupo he- sión y al radio, e inversamente proporcional
terogéneo de desórdenes hereditarios del te- al grosor de la pared del vaso. La tasa de ex-
jido conectivo, caracterizado por hipermovili- pansión de un aneurisma en la aorta ascen-
dad articular, hiperextensivilidad de la piel y dente es de 1,3 ± 1,2 mm por año, y en el
fragilidad tisular. La incidencia estimada es de abdomen 3,1 ± 3,2 mm por año. Una relación
1/5000 nacimientos. del diámetro del aneurisma y el diámetro de
Ectasia anulo aórtica y disección aórtica fa- la aorta normal menor de 2,2 indica un bajo
miliar: es diagnosticada en 5%-10% de los pa- riesgo de ruptura del aneurisma de la aorta
cientes que van a reemplazo valvular aórtico por abdominal. La relación es de 2,7 en pacien-
insuficiencia aórtica pura. La agregación familiar tes asintomáticos y de 3,4 en pacientes con
de la dilatación aórtica torácica está presente. ruptura. En resumen, el riesgo de ruptura de
un aneurisma se relaciona con el diámetro
Aneurismas aórticos abdominales y disección aórtico.
Enfermedad aórtica en la niñez y la adoles-
cencia.

TABLA 1. DIMENSIONES AÓRTICAS NORMALES EN ADULTOS

DIÁMETRO
Anillo aórtico
• Hombres 2,6 ± 0,3 cm ETT
• Mujeres 2,3 ± 0,2 cm ETT
Seno de valsalva
• Hombres 3,4 ± 0,3 cm ETT
• Mujeres 3,0 ± 0,3 cm ETT
Raíz aórtica <3,7 cm ETT
Aorta ascendente proximal
• Hombres 2,9 ± 0,3 cm ETT
• Mujeres 2,6 ± 0,3 cm ETT
Aorta ascendente <3,8 cm (2,5-3,8) TAC <3,7 ETT
Aorta descendente <2,8 cm (1,7-2,8) TAC 1,0-1,6 ETE
Grosor de la pared de la aorta <4mm (ecoTE,TAC)<3mm (angioRMN)

ETE (eco transesofágico), ETT (eco transtorácico), TAC (tomografía axial computadorizada), AngioRMN (angioresonancia magnética)

510
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

ETIOLOGÍA por hongos son raras, pero puede causar des-


trucción focal de los vasos de la pared con
La arterioesclerosis es la principal causa de subsiguiente formación de aneurismas y/o
formación de aneurismas aórticos. Esta oca- ruptura. Las enfermedades autoinmunes de
siona un engrosamiento de la íntima, que de- la aorta pueden afectar severamente los vasa
sarrolla fibrosis masiva, calcificación e incre- vasorum y disminuir la suplencia de sangre a
mento en la cantidad de ácidos grasos extra- la media. Entre estas enfermedades autoinmu-
celulares. Estos cambios contribuyen a un en- nes se encuentran la aorto-arteritis de Taka-
durecimiento en la pared de los vasos y a una yasu, la arteritis de células gigantes (arteritis
mayor vulnerabilidad a la ruptura por estrés, temporal, arteritis de células gigantes disemi-
que eventualmente lleva a la formación de nada, angeitis primaria del sistema nervioso),
aneurismas y disecciones, especialmente en enfermedad de Behcet, aortitis asociada con
la aorta infrarrenal. Las rupturas son más fre- enfermedad reumatoidea, aneurisma abdomi-
cuentes en la aorta ascendente (65%), y me- nal aórtico inflamatorio y la aortitis relaciona-
nos frecuentes en la aorta abdominal (32%). da con fibrosis retroperitoneal (enfermedad de
Los aneurismas fusiformes torácicos tienen un Ormond).
mayor riesgo de ruptura (61%) que los de la
aorta abdominal. La ruptura aórtica se encuen- La inflamación relacionada con enfermedades
tra en 0,9% de los casos de muerte súbita, y infecciosas como la aortitis luética puede lle-
la disección aórtica está presente en un 62% var a cambios similares a la arteritis de Taka-
de estos pacientes, los aneurismas ateroes- yasu. La aortitis es la principal manifestación
cleróticos en 37% y los falsos aneurismas en cardiovascular de la sífilis, encontrándose
1,6%. El principal riesgo para la formación de coon mayor frecuencia en la aorta ascenden-
aneurismas por arterioesclerosis es la hiper- te. La artritis reumatoidea puede producir aor-
tensión, la cual está presente en 85% de los titis, pero la disección es inusual. Diferentes
casos con ruptura y en 52% de los casos sin drogas como la cocaína y las anfetaminas se
ruptura. Otros factores de riesgo, como taba- asocian con formación de aneurismas y disec-
quismo e hipercolesterolemia, aparecen aso- ción aórtica. Otras lesiones congénitas de la
ciados con un aumento en la incidencia de aorta como la coartación aórtica y la válvula
aneurismas aórticos. Sin embargo, 60% de los aórtica bicúspide se asocian con aumento de
pacientes exhiben niveles de colesterol me- la frecuencia de disección. Otros desórdenes
nores de 240 mg/dl. hereditarios como el síndrome de Turner, tam-
bién se asocian con esta patología. El emba-
Entre 15% y 20% de las muertes secundarias razo se ha descrito como causa de disección
a accidentes de alta velocidad se relacionan aórtica por los efectos de esta condición so-
con trauma aórtico y se ven frecuentemente bre la pared de la aorta (estrés hemodinámico
asociados con contusión miocárdica. La disec- que predispone a disección de la media).
ción aórtica iatrogénica está relacionada con
cateterismo cardiaco, angioplastia, cirugía y
colocación de balón de contrapulsación intra- CLASIFICACIÓN DE LA DISECCIÓN
aórtica. AÓRTICA
Las enfermedades inflamatorias pueden des- La clasificación de disección aórtica de Stan-
truir la capa media de la pared aórtica y llevar ford, diferencia entre disección Tipo A y Tipo
a su debilitamiento. Las aortitis bacterianas y B (Tabla 2). Tipo A es la disección que com-

511
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

promete la aorta ascendente, y la Tipo B es MANEJO CLÍNICO


la que no compromete ésta aorta.
CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS
La clasificación de De Bakey subdivide la di-
sección en Tipo I, disección que compromete Síntomas: el principal reto en el manejo de la
toda la aorta; Tipo II, disección que compro- disección aórtica es la sospecha que lleve a
mete la aorta ascendente; y Tipo III, disección un diagnóstico temprano. El cuadro típico de
de la aorta descendente. un paciente con disección aórtica en el depar-
tamento de urgencias es el de un hombre en
Nuevos estudios han demostrado que la he- la sexta década, con historia de hipertensión
morragia, los hematomas intramurales y las y con aparición súbita de dolor torácico. Las
úlceras aórticas pueden ser signos de subtipos siguientes características están presentes en
de disección, por lo que una nueva diferencia- más de 90% de los pacientes en urgencias:
ción ha sido propuesta por Svenson y colabo-
radores: Clase 1: disección aórtica clásica con • Dolor de comienzo súbito que alcanza la
un flap intimal entre la verdadera y la falsa máxima intensidad desde el inicio. A medi-
luz; Clase 2: disrupción de la media con for- da que la disección avanza, el dolor puede
mación de hematoma o hemorragia intramural; cambiar de localización. El dolor es descri-
Clase 3: disección discreta sin hematoma, pro- to como cortante. Es diferente del dolor del
tuberancia excéntrica en el sitio de la ruptura; infarto de miocardio, en que la intensidad
Clase 4: ruptura de la placa que lleva a ulcera- aumenta con el tiempo.
ción aórtica, úlcera ateroesclerótica penetran- • En disecciones proximales, el dolor está
te con hematoma alrededor, usualmente usualmente localizado retroesternalmente,
subadventicio; Clase 5: disección iatrogénica mientras que las disecciones distales se ca-
o traumática. racterizan por dolor interescapular y lumbar.
• La hipertensión está frecuentemente aso-
La disección puede ser aguda o crónica; una ciada con disección aórtica distal.
disección se considera crónica si han pasado • Los diagnósticos diferenciales deben ser
más de 14 días entre el evento agudo, o si ha tenidos en cuenta, considerando que hay
sido encontrada incidentalmente. presentaciones menos típicas. El dolor torá-
cico puede estar ausente, lo cual es indi-
Las clasificaciones de Stanford y de De Bakey cativo de disección aórtica crónica. Más de
son las más prácticas y más pupulares. 20% de los pacientes con disección aórtica
crónica pueden presentarse como un cua-
dro sincopal sin historia de dolor torácico o
TABLA 2. hallazgos neurológicos. Después de un
cuadro de dolor, la falla cardiaca puede ser
CLASIFICACIÓN DE STANFORD el síntoma principal, y se relaciona frecuen-
Tipo A disección de la aorta ascendente y descendente temente con insuficiencia aórtica severa.
Tipo B disección de la aorta descendente El taponamiento cardiaco puede resultar en
CLASIFICACIÓN de DE BAKEY hipotensión y síncope.
Tipo 1 disección de toda la aorta
Tipo 2 disección de aorta ascendente El síncope puede resultar de dolor severo,
Tipo 3 disección de aorta descendente‘
obstrucción de los vasos cerebrales o activa-
ción de barorreceptores aórticos. Manifesta-

512
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

ciones cerebrovasculares e isquemia de extre- Si la bifurcación iliaca está completamente


midades con déficit de pulsos son causados obstruida se presenta un síndrome de Leriche,
por obliteración de vasos periféricos, compro- con pérdida de pulsos en ambas piernas y tí-
miso del origen de los vasos dentro de la disec- picamente sin dolor. Un soplo diastólico com-
ción u obliteración de la luz por una falsa luz. patible con insuficiencia aórtica está presente
en casi la mitad de los pacientes con disec-
Se puede desarrollar paraplejia súbita en la ción aórtica proximal. Ocasionalmente el so-
medida que las arterias intercostales son se- plo puede ser muy débil y la típica tensión arte-
paradas de la luz de la aorta por la disección. rial divergente y otros signos de insuficiencia
El compromiso de las arterias renales puede aórtica severa pueden estar ausentes. Signos
resultar en oliguria o anuria. La fiebre no es de compromiso pericárdico como frote, ingur-
un síntoma común, pero puede presentarse gitación yugular o pulso paradójico, deben
por liberación de sustancias pirógenas de la alertar sobre la necesidad de intervención qui-
pared de la aorta y puede persistir por largo rúrgica pronta. Los derrames pleurales pueden
tiempo y ser malinterpretada como un signo ser causados por ruptura de la aorta hacia el
de sepsis. espacio pleural; el lado izquierdo está usual-
mente comprometido.
Examen físico: puede proporcionar claves
importantes para determinar la presencia y el La pleurocentesis revela la presencia de san-
origen de la disección aórtica. Mientras el dé- gre, indicando la necesidad de cirugía de
ficit de pulso se ha descrito en algunas series emergencia. No obstante, un derrame pleural
en 50% de los pacientes con disección aórtica puede ser la simple expresión de una reacción
proximal, otras series reportan este hallazgo inflamatoria exudativa de la disección aórtica
en menos del 20%. Este fenómeno de pulso y no requerir más que observación, o si es de
puede ser transitorio debido a que la íntima gran volumen, una toracentesis. En más de
del flap cambia de posición. Los déficits neuro- 30% de los pacientes con disección aórtica
lógicos (pérdida de conciencia, paresia isqué- se sospechó otra condición inicialmente, como
mica) ocurren en más de 40% de los pacien- síndrome coronario agudo, aneurismas no
tes con disección aórtica proximal. disecantes, embolismo pulmonar o estenosis
aórtica. Por lo tanto, el diagnóstico diferencial
En raras ocasiones, síntomas como parálisis de disección aguda de la aorta debe ser siem-
de cuerdas vocales (causada por compresión pre considerado en pacientes con síncope no
del nervio laríngeo recurrente izquierdo), he- explicado, falla cardiaca de inicio agudo,
moptisis o hematemesis (debido a hemorragia isquemia aguda de extremidades o vísceras.
en el árbol traqueobronquial o perforación ha-
cia el esófago), síndrome de vena cava supe-
rior, obstrucción de vía aérea superior por DIAGNÓSTICO INICIAL
compresión, síndrome de Horner (por compre- EN EL SERVICIO DE URGENCIAS
sión del ganglio simpático cervical superior),
signos sugestivos de embolismo pulmonar (si Siempre se debe solicitar un electrocardiogra-
hay extravasación de sangre, desde el falso ma para diferenciar un infarto agudo de miocar-
canal hacia la adventicia de la aorta ascen- dio, condición en la cual la trombolisis es una
dente y arteria pulmonar que lleva a severa terapia salvadora, de una disección aórtica en
compresión de la arteria pulmonar) o signos que la trombolisis puede empeorar el cuadro
de isquemia mesentérica o renal. clínico. Pero las dos condiciones pueden coexis-

513
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

tir, ya que la disección puede extenderse hasta tino ensanchado puede hacer sospechar el
el origen de las coronarias (usualmente la coro- cuadro de disección aórtica, pero el papel de
naria derecha), causando isquemia miocárdica la radiografía de tórax aún no aparece claro.
aguda. Tal compromiso coronario induce signos La radiografía de tórax de rutina puede ser
electrocardiográficos de infarto agudo de miocar- anormal en 60-90% de los casos con sospe-
dio; un electrocardiograma normal se encuen- cha de disección aórtica, aumentando la pro-
tra en un tercio de los pacientes con compromi- babilidad del diagnóstico. En pacientes ines-
so coronario, y muchos no exhiben cambios tables, esta radiografía puede demorar el tra-
específicos en el segmento ST. Cerca de 20% tamiento y puede ser omitida.
de los pacientes con disección Tipo A tienen evi-
dencia electrocardiográfica de isquemia aguda La disección y formación de hematoma pue-
o de infarto agudo del miocardio. de verse reflejada en exámenes de laborato-
rio: proteína C reactiva elevada, leucocitosis
Los pacientes con sospecha de patología aór- leve a moderada y pequeñas elevaciones de
tica y evidencia electrocardiográfica de isque- la bilirrubina y la deshidrogenasa láctica. Re-
mia deben ir a diagnóstico imagenológico an- cientemente el diagnóstico bioquímico de la
tes de administrar terapia trombolítica. La ra- disección aórtica ha sido posible por la identi-
diografía de tórax no es suficiente para descar- ficación de concentraciones elevadas de mio-
tar disección aórtica; no obstante, un medias- sina de cadena pesada del músculo liso.

TABLA 3. MANEJO INICIAL DE LOS PACIENTES CON SOSPECHA DE DISECCIÓN AÓRTICA

RECOMENDACIÓN CLASE I, II, III NIVEL EVIDENCIA


1. HC y examen físico detallado * C
2. Línea IV, CK, troponina, Cuadro hemático, Dímero D, LDH * C
3. ECG : documentar isquemia * C
4. Monitoría de FC y TA * C
5. Manejo del dolor: morfina * C
6. Control de TA sistólica usando Beta-bloqueadores
(esmolol,metoprolol,labetal) * C
7. Traslado a unidad de cuidados intensivos * C
8 . Vasodilatador adicional (nitroprusiato) en pacientes muy hipertensos;
tratar de mantener TA entre 100-120 mmHg * C
9. En pacientes con EPOC, controlar TA con calcio antagonistas. * C
10.Estudio imagenológico en pacientes con signos en ECG de isquemia y
sospecha de patología aórtica * C
11. RX tórax * C

HC: Historia Clínica FC: Frecuencia cardiaca Rx: Radiografía


TA: Tensión arterial ECG: Ellectrocardioograma EPOC: Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica

514
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

DECISIONES TERAPÉUTICAS en pacientes que tienen contraindicado el uso


INICIALES de beta bloqueadores o en pacientes con as-
ma. Si los beta bloqueadores solos no contro-
Todo paciente con sospecha de disección aór- lan la hipertensión, los vasodilatadores pue-
tica debe ir a una de las técnicas imagenoló- den ser usados como agentes adicionales, te-
gicas que se discuten más adelante. Mientras niendo en cuenta que dichos vasodilatadores
se establece el diagnóstico, el paciente debe pueden aumentar la fuerza de eyección ven-
ser trasladado a una unidad de cuidados inten- tricular izquierda, por lo que siempre deben
sivos para monitoría continua con una línea ser utilizados con beta bloqueadores. Entre
para reposición de líquidos endovenosos y los vasodilatadores está el nitroprusiato de
otra para la administración de medicamentos. sodio con dosis iniciales de 0,25 mg/kg/min,
En el paciente hemodinamicamente inestable que es administrado buscando cifras tensio-
se debe realizar monitoría invasiva de la ten- nales sistólicas entre 100-120 mmHg. La dis-
sión arterial mediante línea arterial radial de- minución de las cifras tensionales debe ser
recha. Si se sospecha compromiso del tronco modificada si hay evidencia de oliguria o alte-
braquiocefálico (raramente visto), se debe co- raciones neurológicas.
locar la línea en el lado izquierdo. Es impor-
tante descartar la presencia de pseudo hipo- Pacientes con presión sistólica normal o baja
tensión por obstrucción de una rama del arco al inicio del cuadro pueden tener depleción de
aórtico. En este caso la medición de la tensión volumen como resultado de secuestro de san-
arterial se debe realizar en ambos brazos. gre en la falsa luz del espacio pericárdico o
Mientras el paciente espera para diagnóstico pleural. Pacientes con inestabilidad hemodiná-
imagenológico, se debe controlar el dolor y mica marcada deben ser llevados a ventila-
reducir la presión arterial sistólica a valores ción mecánica y trasladados a cirugía. El eco
entre 100 y 120 mmHg. transesofágico puede ser realizado en urgen-
cias como procedimiento diagnóstico y para
El medicamento más apropiado para control detectar condiciones como taponamiento
del dolor es la morfina. Los beta bloqueadores cardiaco. La pericardiocentesis como terapéu-
son medicamentos que disminuyen la fuerza tica antes de la cirugía no está indicada debi-
de la eyección del ventrículo izquierdo, la cual do a que reduce la presión intrapericárdica y
continúa debilitando la pared arterial. Los beta puede producir sangrado recurrente.
bloqueadores intravenosos como el propra-
nolol (0,05-0,15 mg/kg cada 4-6 horas), esmo- Para el diagnóstico y manejo de la disección
lol (bolo 0,5 mg/kg en 5 minutos seguido por aórtica no existen datos disponibles de medi-
una infusión de 0,10-0,20 mg/kg/min.) pueden cina basada en la evidencia para recomenda-
ser administrados, al igual que el metoprolol ciones A y B, por lo que las recomendaciones
y el atenolol, teniendo en cuenta que estos de la literatura corresponden a recomendación
dos últimos tienen una vida media más larga. C, es decir basadas en consenso de expertos.
El labetalol, que bloquea receptores alfa y beta A su vez este nivel de recomendación se divide
adrenérgicos, también puede ser usado. en grado CI, que significa consenso de todos
los expertos, grado CII consenso de la mayoría
No hay estudios que soporten el uso de calcio de los expertos pero sin datos disponibles que
antagonistas en estos pacientes, pero el diltia- soporten esta decisión y grado CIII sin consen-
zem o verapamilo pueden ser necesarios para so de los expertos ni datos disponibles que
el control de la hipertensión, especialmente soporten esta decisión.

515
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 4. MANEJO DE PACIENTES INESTABLES HEMODINAMICAMENTE, CON SOSPECHA DE DISECCIÓN AÓRTICA

RECOMENDACIONES CLASE NIVEL DE EVIDENCIA


1. Inestabilidad hemodinámica: Intubación y ventilación mecánica * C
2. ETE como procedimiento diagnóstico único; llamar a cirugía. * C
3. Cirugía basada en taponamiento cardiaco por ETT * C
4. Pericardiocentesis antes de cirugía * C

ETE: Ecocardiograma transesofágico


ETT: Ecocardiograma transtorácico

DIAGNÓSTICO
La información es esencial para confirmar el trombosada, el desplazamiento del flap inti-
diagnóstico. La demostración de un flap de la mal, calcificación o separación de las capas
íntima separando la luz del vaso es la base intimales pueden ser considerados como sig-
para el diagnóstico y clasificación de la disec- nos definitivos de disección aórtica.
ción aórtica. Si la falsa luz está completamente

TABLA 5

METAS DE LA HERRAMIENTA IMAGENOLÓGICA


• Confirmar el diagnóstico
• Clasificar la disección y establecer la extensión
• Diferenciar entre la luz falsa y la verdadera
• Localizar el sitio de ruptura de la íntima
• Diferenciar entre disección comunicante y no comunicante
• Evaluar el compromiso de las ramas de la aorta (incluyendo arterias coronarias)
• Detectar la presencia y grado de insuficiencia aórtica
• Detectar extravasación (hematoma periaórtico o mediastinal, derrame pericárdico o pleural)

La decisión del método diagnóstico depende Si se sospecha una disección aórtica y no hay
de dos factores mayores: disponibilidad diagnóstica ni de tratamiento,
debe asegurarse remisión pronta a un centro
• Disponibilidad en situaciones de urgencia. con equipos intervencionista y quirúrgico.
• Experiencia del departamento de urgencias Cada institución debe establecer guía de ma-
y del departamento de imágenes diagnós- nejo para el diagnóstico temprano según los
ticas. recursos presentes.

516
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

TABLA 6. DIFERENCIAS ENTRE ANEURISMA ATEROESCLERÓTICO DE LA AORTA Y DISECCIÓN AÓRTICA

ANEURISMA DISECCIÓN
Diámetro aórtico ++ +
Grosor de la pared +(+) Normal, excepto por: hematoma o hemo-
rragia intramural
Superficie de la luz Rugosa Plana
Formación de trombo En la luz del vaso En la falsa luz
Trombo flotante ++ En la falsa luz
Desplazamiento de calcificaciones intimales + ++
Signos de flujo lento A menudo dentro de la luz En la falsa luz

TABLA 7. DIFERENCIAS ENTRE DISECCIÓN AÓRTICA COMUNICANTE Y NO COMUNICANTE

DISECCIÓN COMUNICANTE DISECCIÓN NO COMUNICANTE


Ruptura intimal Íntima intacta
Flujo en la falsa luz No flujo en la falsa luz
Movimiento monofásico del flap intimal Sin movimiento o con movimiento limitado en el flap
intimal
Señal de alto flujo en la falsa luz Señal de flujo reducido
Ausencia de trombo o formación incompleta de trombo Formación de trombo en la falsa luz completa o
en la luz falsa incompleta

MODALIDADES IMAGENOLÓGICAS ma pulmonar o en ventilación mecánica.


Estas limitaciones han sido superadas por
Diferentes métodos directos e indirectos, así el eco transesofágico (ETE), que exhibe
como técnicas invasoras y no invasoras, pue- una sensibilidad de 89-99%, especificidad
den ser empleados para diagnosticar disec- de 88-89%, valor predictivo positivo de 89-
ción aórtica: 97% y valor predictivo negativo de 93-99%.

• Ecocardiograma transtorácico (ETT) y Existe una limitación en la visualización de


transesofágico (ETE): el ETT permite la pequeños segmentos localizados en la par-
detección de un flap intimal en la aorta, con te distal de la aorta ascendente y la porción
sensibilidad y especificidad de 77-80% y anterior del arco aórtico, la cual es conocida
93-96%, respectivamente para disección como el punto ciego. Este problema es oca-
de aorta ascendente. No obstante el éxito sionado por la interposición de la traquea
para detectar disecciones distales de la y el bronquio fuente izquierdo entre el esó-
aorta torácica sólo es de 70%. El valor del fago y la aorta. La alta resolución de este
ETT es limitado en paciente con configura- método diagnóstico permite el diagnóstico
ción anormal de la pared torácica, espacios de hematoma intramural, placa ulcerada,
intercostales pequeños, obesidad, enfise- etc. Si se requiere mayor resolución espa-

517
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cial, se debe combinar con escanografía o atípicas de disección. En algunos pacientes


resonancia magnética. determinar la anatomía coronaria es de gran
importancia antes de la cirugía de repara-
• Tomografía axial computadorizada ción, por lo cual la coronariografía es la prue-
(TAC): es la técnica más utilizada en pa- ba de elección para descartar compromiso
cientes con sospecha de disección aórtica. o lesión en el árbol coronario.
La sensibilidad es superior a 90% y la es-
pecificidad del orden de 85%. La extensión, • Ultrasonido endovascular: es un procedi-
localización y compromiso de la disección miento seguro que puede ser realizado en
aórtica pueden ser determinadas, al igual 10 minutos, como complemento de la infor-
que signos de alarma y emergencia. Las mación angiográfica. Visualiza directamente
limitaciones están relacionadas con el diag- la arquitectura de la pared del paso desde
nóstico de insuficiencia aórtica y con disec- la luz aórtica y permite reconocer las carac-
ciones aórticas discretas. El diagnóstico se terísticas de la pared de la aorta. El ultrasoni-
fundamenta en la demostración de un flap do endovascular permite definir disecciones
intimal, el cual separa la luz falsa de la ver- distales de aorta abdominal. La sensibilidad
dadera. Otros hallazgos incluyen despla- y especificidad es casi del 100%.
zamiento interno de la íntima calcificada.

• Resonancia magnética (RM): es altamente TERAPIA QUIRÚRGICA


sensible y específica, pero no está disponi- E INTERVENCIONISTA
ble en todos los servicios de urgencias y tiene
limitación en los pacientes inestables. Posee TERAPIA QUIRÚRGICA
la más alta sensibilidad y especificidad (casi El objetivo de cualquier intervención quirúrgi-
100%) en todas las formas de disección ca en disección aórtica tipo A (tipo I,II) es la
aórtica, excepto las formas discretas. La RM prevención de ruptura aórtica o el desarrollo
proporciona excelente visualización de la lo- de derrame pericárdico que pueda llevar a
calización de la disección, insuficiencia taponamiento cardiaco. Por lo tanto, es de
aórtica, compromiso y complicaciones. suma importancia eliminar la insuficiencia aór-
tica y evitar isquemia. En la disección tipo B
• Aortografía: la aortografía retrógrada fue (tipo III) la principal meta es prevenir la ruptu-
la primera herramienta diagnóstica para eva- ra aórtica. En la disección tipo A se realiza la
luar pacientes con sospecha de disección implantación de un injerto en la aorta ascen-
aórtica, y fue considerada por varias déca- dente con o sin reimplantación de arterias
das como el método diagnóstico de elección. coronarias. La cirugía en disección tipo B está
El diagnóstico angiográfico se basa en sig- limitada a los siguientes criterios:
nos angiográficos directos como la visualiza-
ción del flap intimal, reconocimiento de dos • Dolor torácico persistente o recurrente.
luces en el vaso, o signos indirectos como • Expansión aórtica.
irregularidades en la luz de la aorta, rigidez • Hematoma periaórtico.
o compresión, engrosamiento de la pared • Hematoma mediastinal.
de la aorta e insuficiencia aórtica. La espe-
cificidad de la aortografía es de 95% o más, En las siguientes tablas se dan las recomen-
pero su sensibilidad es menor que la de daciones para manejo quirúrgico de la disec-
otras técnicas, especialmente en formas ción aórtica.

518
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

TABLA 8. TERAPIA QUIRÚRGICA PARA DISECCIÓN AÓRTICA TIPO A (TIPO I Y II)

RECOMENDACIONES CLASE I, IIa, IIb, III NIVEL DE EVIDENCIA


1. Cirugía de emergencia para evitar taponamiento cardíaco
o ruptura aórtica * C
2. Cirugía preservando la válvula aórtica: si no hay alteraciones
en la válvula. Injerto tubular * C
3. Reemplazo de la aorta y la válvula aórtica si hay cambios
ectásicos proximales de la aorta o alteraciones en la válvula
aórtica. Injerto. * C
4. Preservación de válvula con remodelación de la raíz
aórtica para válvulas anormales. * C
5. Preservación de válvula con remodelación de la raíz aórtica
en pacientes con Marfan * C

TABLA 9. TERAPIA QUIRÚRGICA PARA DISECCIÓN AÓRTICA TIPO B (TIPO III)

RECOMENDACIONES CLASE I, IIa, IIb, III NIVEL EVIDENCIA


1. Manejo médico. * C
2. Reemplazo aórtico si hay signos de dolor persistente o
recurrente, expansión temprana, complicaciones isqué-
micas periféricas, ruptura. * C
3. Fenestración quirúrgica o endovascular y colocación de stent
si persisten signos de isquemia mesentérica, renal o de extre-
midades, o déficits neurológicos. * C

La técnica quirúrgica en la disección aórtica allá del arco aórtico y sus ramas, consiste en
varía según el origen y la localización de la la resección de la aorta descendente, proximal
disección y su extensión. La meta del ciruja- al sitio de la disección, con cierre de la falsa
no es remover la ruptura proximal y cerrar la luz y reemplazo del segmento extraído con
falsa luz. Para las disecciones que comprome- injerto aórtico. La mortalidad quirúrgica varía
ten la aorta ascendente, el procedimiento con- con el tipo y estadio de la enfermedad, pero
siste en la transección de dicha aorta ascen- en general se acerca al 15%.
dente con el uso de circulación extracorpórea,
el cierre de la falsa luz y la anastomosis térmi- El tratamiento convencional de la disección
no-terminal de la aorta seccionada. En algu- tipo A (Tipo I,II) consiste en la reconstrucción
nas ocasiones puede ser necesario colocar quirúrgica de la aorta ascendente con restau-
un parche o un injerto. La insuficiencia aórtica ración del flujo hacia la luz verdadera. En la
puede resultar de una pérdida del soporte co- disección tipo B (Tipo III) con complicaciones
misural de las valvas, que puede ser corregida, isquémicas, el tratamiento incluye la recons-
pero en otros pacientes puede requerir reem- trucción del segmento de aorta torácica que
plazo valvular con un injerto. El tratamiento tiene la disección, bypass del órgano o extre-
quirúrgico para la disección que comienza más midad comprometida o fenestración quirúrgi-

519
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ca. Cuatro patrones mayores de complicacio- Estas técnicas tienen como propósito cerrar
nes isquémicas pueden ser distinguidos, de- el sitio de entrada de la falsa luz, descomprimir
pendiendo de las características y curso de la y producir trombosis de la falsa luz y corregir
luz falsa y verdadera, así como de las ramas la obstrucción de las ramas de la aorta que se
aórticas comprometidas: vieron comprometidas por la disección. Los
resultados de algunos estudios publicados
• Compresión de la luz verdadera en la re- (Dake y colegas publicado en NEJM 349,1999;
gión de las ramas principales abdominales. Nienaber y colegas publicado en NEJM 340,
• Compresión de la luz verdadera proximal 1999; Vlahakes y colegas publicado en NEJM,
a las ramas abdominales principales. 340, 1999) son prometedores, aunque se ne-
• Compromiso de ramas principales aórticas cesitan más estudios antes de que la terapia
en la disección. con injertos y stents percutáneos sean acep-
• Aumento del falso aneurisma por una en- tados como terapia regular en la disección
trada proximal patente. aórtica.

El tratamiento incluye reconstrucción del seg-


mento aórtico torácico que contiene la disec- INDICACIONES PARA COLOCACIÓN
ción, bypass del órgano comprometido o ex- DE STENT Y FENESTRACIÓN
tremidad o fenestración quirúrgica.
El papel exacto de la fenestración y coloca-
Aproximadamente 90% de los déficits de pul- ción del stent percutáneo en el tratamiento de
so asociados con disección aórtica pueden ser la disección aórtica no ha sido determinado
corregidos mediante la reparación de la aorta aún. No obstante, se presenta como una indi-
torácica. La tasa de mortalidad de pacientes cación en el tratamiento de obstrucciones es-
con isquemia renal es de 50-70%, y la de mor- táticas o dinámicas de ramas de la aorta. La
talidad en la isquemia mesentérica puede lle- terapia intervencionista en la disección aórtica
gar a ser del 87%. La tasa de mortalidad qui- proporciona un nuevo abordaje para el manejo
rúrgica en pacientes con complicaciones is- de las complicaciones. La fenestración aórtica
quémicas periféricas es de 87%, con una con o sin implante de stent permite una solu-
mortalidad hospitalaria del 89%. La tasa de ción inmediata para la isquemia de órganos
mortalidad operatoria de la fenestración qui- como el riñón, o de extremidades comprome-
rúrgica es de 21-67%. tidas por la disección.

INTERVENCIÓN PERCUTÁNEA PRONÓSTICO


Se constituye en una de las promesas de la Sin tratamiento, la mortalidad de la disección
investigación para el tratamiento de pacien- aórtica a los tres meses excede el 90%; 20%
tes de alto riesgo con disección aórtica, y de de los pacientes mueren en el primer día y
aquellos con compromiso renal o visceral en 60% mueren en las siguientes dos semanas.
quienes la mortalidad operatoria excede el La mortalidad es mayor en las disecciones tipo
50%. En la actualidad se encuentran disponi- A. Aunque la mortalidad quirúrgica es alta en
bles dos técnicas: (1) Fenestración con balón ambos grupos, es más alta en los pacientes
(2) Colocación percutánea de stent (férula con disección tipo B por las condiciones de
intraluminal). comorbilidad asociadas. El manejo médico de

520
CAPÍTULO XVII: DISECCIÓN AÓRTICA

la disección aórtica se asocia con una tasa El factor más importante en el seguimiento es
de mortalidad prohibitiva (30% en las prime- un control estricto de las cifras de tensión arte-
ras 24 horas y más de 75% en la primera se- rial, <130/80, los mismos niveles que se bus-
mana). El manejo médico antihipertensivo en can para los pacientes hipertensos sin disec-
disecciones tipo B puede producir cicatriza- ción aórtica.
ción de la disección, o conversión de esta en
una forma subaguda o crónica. Los pacientes que han tenido manejo quirúr-
gico de la disección deben ser seguidos me-
diante resonancia magnética que evita la ex-
SEGUIMIENTO Y PREVENCIÓN posición a radiación ionizante y a agentes
nefrotóxicos usados en tomografía, y es me-
Un seguimiento estrecho para la detección de nos invasiva que el ecocardiograma transeso-
disección aórtica es recomendado en ciertos fágico. Dicha evaluación debe ser realizada
grupos de pacientes, como los que tienen sín- en los meses 1,3,6 y 12, en busca de cambios
drome de Marfan, en quienes dicho segui- en el diámetro de la aorta, signos de formación
miento busca detectar: de aneurismas, hemorragias en los sitios de
• Signos de expansión aórtica. la anastomosis o de la implantación del stent.
• Formación de aneurismas.
• Signos de mala perfusión.

TABLA 10. RECOMENDACIONES PARA LA PREVENCIÓN DE DISECCIÓN AÓRTICA EN ENFERMEDADES HEREDITARIAS


(Síndrome Marfan, Ehler-Danlos, ectasia anuloaórtica)

RECOMENDACIÓN CLASE I, IIa, IIb, III NIVEL EVIDENCIA


Uso de beta bloqueadores a largo plazo. * C
Evaluación imagenológica periódica. * C
Reemplazo profiláctico de la raíz aórtica antes de que el
diámetro exceda 5,0 cm en pacientes con historia familiar
de disección. * C
Reemplazo profiláctico de la raíz aórtica antes de que el diámetro
exceda 5,5 cm. * C
Restricción moderada para actividad física. * C

Hay dos razones principales para la necesi- 40% a 10 años después de la cirugía. Este
dad de reoperación: que la aorta disecada se riesgo es más alto en pacientes con síndro-
vuelva aneurismática (5-6 cm) o que una re- me de Marfan. La aorta proximal, particular-
paración haya sido inadecuada. La tasa de mente la raíz aórtica y la porción ascendente,
reoperación por la disección Tipo I y II es de son los sitios que más frecuentemente requie-
aproximadamente 10% a 5 años y de más de ren reoperación.

521
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS 3. Dake D, Noriyuki K, Mitchell S, Semba C, et al.


Endovascular stent-graft placement for the
1. Erbel R, Alfonso F, Boileau C, et al. Task Force treatment of acute aortic dissection. New Eng J
Report Diagnosis and management of Aortic Med 1999; 340:1546-1552.
Dissection, Recommendations of the Task Forceo 4. Lindsay J. Diagnosis and Treatment of Diseases
in Aortic Dissection, European Society of of the Aorta. Current Problems in Cardiology 1997;
Cardiology. Eur Heart J 2001; 22:1642-1681. 22:485-542.
2. Hagan P, Nienaber C, Isselbacher E, et al. The 5. Isselbacher E. Diseases of the Aorta: Aortic
international Registry of Acute Aortic Dissection Dissection. En: Heart Disease. Editado por E
(IRAD). New insights into an old disease. JAMA Braunwald, P Zipes, D Libby. 6th edition. Saunders
2000; 283:897-903. WB Co. Phyladelphia, 2001.

522
CAPÍTULO XVIII: OBSTRUCCIÓN AGUDA DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR

CAPÍTULO XVIII

Obstrucción aguda de la vía aérea superior

Enrique Arango, MD
Jefe, Departamento de Anestesiología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

E s la súbita interrupción del paso normal


de aire por la parte superior de la vía aé-
rea, la cual se extiende desde las cavidades
4,5 mm: un edema circunferencial de 1 mm
reduce la luz en más de 30%. Esta reducción
hace que el descenso del flujo laminar de gas
nasal y oral hasta la tráquea y se puede sub- con mayor flujo turbulento incremente la re-
dividir en porciones supraglótica y subglótica. sistencia al mismo, lo cual hace que el niño
La glotis está ubicada por encima de las cuer- no tolere algunas lesiones que en cambio pro-
das vocales. La obstrucción aguda es una ducen escasos signos clínicos en el adulto.
emergencia médica que requiere actuación
inmediata, ya que puede causar asfixia que Las causas se pueden clasificar en procesos
lleva con rapidez a hipoxia y puede producir supraglóticos (epiglotitis, abcesos de los es-
la muerte o dejar secuelas neurológicas per- pacios profundos del cuello, lesiones por que-
manentes. maduras) y subglóticos (crup viral, traqueitis
bacteriana, angioedema, aspiración de cuer-
Las entidades que se asocian con obstruc- po extraño, estridor post-extubación). Los trau-
ción de la vía aérea superior (OVAS) se pue- matismos de la vía aérea y las lesiones en
den clasificar según su mecanismo: casos de incendio pueden afectar tanto a la
• Infecciosas - Inflamatorias. zona supraglótica como a la subglótica.
• Cuerpos extraños.
• Traumáticas - Quemaduras. El manejo inicial (valoración, diagnóstico y tra-
tamiento) debe ser no sólo rápido sino ade-
La forma más grave y más frecuente de OVAS cuado: los errores complican la condición clí-
ocurre en lactantes y en niños, no solamente nica y traen el riesgo de paro cardiorespira-
por la mayor incidencia y variedad de proce- torio. Es fundamental que exista un plan de
sos que conducen a ella, sino por las caracte- manejo tanto extra como intrahospitalario con
rísticas de las estructuras anatómicas de la participación de personal experto (médicos de
vía aérea: diámetro pequeño por debajo de la urgencia, anestesiólogos, intensivistas, otorri-
glotis, epiglotis más larga y estructuras supra- nolaringólogos, etc). Algunas de las explora-
glóticas comparativamente más grandes. El ciones e intervenciones sólo deben ser eje-
pequeño diámetro de la tráquea del lactante cutadas por personal experto en el manejo de
hace que la afectación de la vía aérea supe- la vía aérea, manejo que puede implicar ven-
rior por diferentes procesos sea particularmen- tilación con bolsa, intubación e incluso punción
te peligrosa. El diámetro anteroposterior es de traqueal y cricotiroidotomía o traqueostomía.

523
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Inicialmente se debe administrar oxígeno hu- En pediatría, el grado de obstrucción respira-


midificado, que por ser molesto para los ni- toria puede ser cuantificado utilizando alguna
ños se debe dar en la forma que menos los escala de valoración clínica como la Escala
incomode (cánula nasal, mascarilla o directa- de Evaluación del Crup Viral que incluye una
mente a través de una manguera sostenida serie de puntajes clínicos. Aunque la determi-
por los padres). nación de estos puntajes tiene un componen-
te subjetivo, la escala permite que todos los
La pulso-oxímetría constituye la mejor técni- signos de obstrucción se identifiquen y se va-
ca de monitorización no invasora para valorar loren sistemáticamente. Esta información ayu-
la oxigenación, la saturación de oxígeno y la da para la evaluación posterior del paciente:
frecuencia del pulso.

Evaluación de la Gravedad de la Obstrucción en el Crup Viral (Score Taussig)

Indices de gravedad 0 1 2 3
Estridor No Leve Moderado Severo o ausente
(No hay paso de aire)
Retracciones No Escasas Moderadas Severas
Entrada de aire Normal - - -
Cianosis No No No Si
Conciencia Normal Agitado si se le molesta Ansioso agitado Deprimido Letárgico

Estos son signos clínicos inespecíficos que Cuando existe grave compromiso respiratorio
dependen del grado de obstrucción, pero hay con riesgo de paro cardiorrespiratorio inminen-
otros específicos relacionados con la patología te, se administra oxígeno en alta concentra-
responsable, que se referirán más adelante. ción con bolsa y máscara para enseguida pro-
ceder con la intubación endotraqueal y si ésta
Los exámenes complementarios dependen de es imposible, cricotiroidotomía o traqueostomía.
la sospecha diagnóstica y pueden ser uno o va-
rios de los siguientes: radiografía de cuello y tó- En un niño con dificultad respiratoria entre mo-
rax, fibrobroncoscopia, tomografía axial compu- derada y severa se administra oxígeno y no
tadorizada, resonancia magnética. La determi- se realizan maniobras ni exploraciones espe-
nación de gases arteriales en el adulto es útil, ciales mientras no esté presente personal ex-
pero la del equilibrio ácido-base debe interpre- perto en el manejo de la vía aérea. Si fuese
tarse frente a las limitaciones en esta condición necesario intubar, se propone anestesia inha-
clínica: suele afectarse cuando el paciente está latoria pero antes se intenta con el paciente
próximo al agotamiento respiratorio y en las fa- despierto, ya que la aplicación de anestesia
ses previas no expresa la severidad del proceso. se ha relacionado con alta frecuencia de
bradicardia y asistolia.
Las decisiones iniciales de manejo dependen
del grado de obstrucción (severidad) y en al- Si el niño tiene dificultad respiratoria entre leve
gunos casos de la sospecha diagnóstica. y moderada, únicamente se administrará oxí-

524
CAPÍTULO XVIII: OBSTRUCCIÓN AGUDA DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR

geno humidificado si lo tolera, en presencia cuello puede apreciarse sobredistensión de la


siempre de la familia, para proceder luego a hipofaringe durante la inspiración.
realizar las pruebas diagnósticas.
El crup suele ser habitualmente benigno y
autolimitado y no requiere medidas terapéuti-
CAUSAS INFECCIOSAS – cas especiales; sin embargo, entre 5% y 20%
INFLAMATORIAS de los pacientes que acuden al servicio de ur-
gencias pueden presentar obstrucción de vía
CRUP VIRAL aérea superior de grado moderado ó severo.

Inicialmente el término “crup” (o “croup”) se


aplicó a la difteria laríngea; actualmente se TRAQUEÍTIS BACTERIANA
utiliza como sinónimo de laringitis, laringotra-
queitis o laringotraqueobronquitis de etiología También se denomina crup pseudomembra-
viral, caracterizadas por tos “perruna”, afonía, noso o laringotraqueítis membranosa. La tra-
estridor inspiratorio y dificultad respiratoria de queobronquitis necrosante es un proceso in-
grado variable, debida principalmente a infla- flamatorio necrótico, una infección bacteriana
mación subglótica, aunque a veces afecta a de la zona subglótica que causa edema y
todo el árbol bronquial; hay también incremen- acúmulo de secreciones purulentas. Se pre-
to en la cantidad y viscosidad de las secre- senta en niños de 4 meses a 6 años. Los agen-
ciones. tes etiológicos más frecuentes son Staphylo-
coccus aureus, Haemophylus influenzae tipo
Es un proceso de alta incidencia en niños y B y Streptococcus pneumoniae.
constituye la causa más frecuente de obstruc-
ción de la vía aérea superior en pediatría; afec- El diagnóstico se basa en la sospecha clínica
ta a niños menores de 6 años, con mayor fre- ante un paciente que comienza con signos clí-
cuencia entre los 6 meses y los 3 años, con nicos de laringotraqueobronquitis viral, aunque
predominio en varones. a diferencia de ésta, presenta fiebre elevada
y signos de toxicidad que lo hacen ver muy
El agente etiológico más frecuente es el Virus enfermo; otra de sus características es que, a
parainfluenzae de tipos 1 y 3 aunque también diferencia de los pacientes con crup, no res-
pueden producirlo el adenovirus, virus gripal ponde a los aerosoles de adrenalina. El diag-
y otros virus. La exploración clínica debe rea- nóstico se confirma por la broncoscopia, que
lizarse en ambiente tranquilo y en presencia muestra estructuras supraglóticas normales,
de los padres. En los casos moderados y gra- edema subglótico y secreciones purulentas en
ves se debe administrar oxígeno durante la la tráquea. El tratamiento debe hacerse en la
exploración. unidad de cuidado intensivo pediátrico, pues
debido a la severidad del compromiso de la
Las exploraciones complementarias ayudan vía aérea, suele ser necesaria la intubación
al diagnóstico de los casos dudosos y a veces endotraqueal. El aspirado de secreciones es
a la valoración de la gravedad: la radiografía fundamental para evitar la obstrucción. Los
anteroposterior de cuello muestra estrecha- antibióticos constituyen un aspecto importan-
miento progresivo de la tráquea con vértice te de la terapéutica y se seleccionan de acuer-
en la glotis (estenosis subglótica con signo de do con los resultados bacteriológicos de los
“punta de lápiz”). En la radiografía lateral de cultivos tomados durante la broncoscopia o

525
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

inmediatamente después de la intubación La radiografía lateral de cuello sólo debe rea-


endotraqueal. lizarse en casos de diagnóstico dudoso y si el
paciente está estable.

EPIGLOTITIS El protocolo de manejo depende de la estabili-


dad del paciente: si está muy inestable (obnu-
La epiglotitis es una entidad muy grave, que bilado, cianótico, etc) se ventila con máscara
se caracteriza por infección bacteriana de los y bolsa con oxígeno al 100% y se intuba de
tejidos supraglóticos; también se denomina urgencia. Si no fuese posible la intubación se
supraglotitis. Las estructuras anatómicas su- realiza cricotiroidotomía con el equipo espe-
praglóticas del niño son comparativamente cífico para ello o en su defecto, punción tra-
mayores que en el adulto, la epiglotis es más queal con angiocatéter que se conecta a bolsa
larga y dichas estructuras están cubiertas por de ventilación. Si el paciente está estable se
tejido conectivo laxo. Un proceso infeccioso procede a examen físico breve, manteniendo
en estas estructuras ocasiona con facilidad al niño sentado y acompañado de los padres;
edema inflamatorio que produce obstrucción. habitualmente no se intenta examen faríngeo.
Si el niño lo tolera, se administra oxígeno.
Afecta fundamentalmente a niños de 2 a 5
años y también puede afectar al adulto. Sin Si el diagnóstico de epiglotitis es dudoso se
embargo, a diferencia de los niños, en los adul- realiza radiografía lateral de cuello con apa-
tos el cuadro es más gradual y menos frecuen- rato portátil o visualización directa de la larin-
te el compromiso de la vía aérea, por lo que ge en la sala de reanimación, donde se dis-
habitualmente el tratamiento es conservador, pone de equipo para cricotiroidotomía percutá-
es decir sin intubación. nea por si fuese necesaria.

La clínica de la epiglotitis se caracteriza por Es esencial evitar la extubación accidental de


comienzo agudo con fiebre elevada y dolor estos pacientes por el riesgo de obstrucción se-
de garganta, aparecen en pocas horas disfa- vera de la vía aérea y posible paro; por ello, se
gia, babeo y negativa del niño a comer y be- debe mantener buena sedación y medidas que
ber. No suele presentarse tos y el estridor no limiten el movimiento de los brazos del paciente.
es tan ruidoso como en el crup severo, sino
de tono bajo y húmedo. El niño presenta tam- En general, no se requiere ventilación mecá-
bién con gran rapidez aspecto tóxico y adopta nica salvo en circunstancias especiales, como
posición en trípode (posición semisentada e al aparecer edema agudo de pulmón tras la
inclinada hacia delante con los brazos hacia intubación.
atrás), con el cuello estirado, boca abierta, len-
gua hacia fuera y babeando. Con esta posi-
ción evita que la epiglotis inflamada caiga so- ASPIRACIÓN DE CUERPO EXTRAÑO
bre la glotis y la obstruya.
En niños, la obstrucción parcial o completa de
El diagnóstico suele ser fácil si el niño pre- la vía aérea superior por cuerpo extraño sue-
senta tal cuadro clínico. No se deben realizar le acontecer especialmente entre los 6 me-
exploraciones físicas o pruebas complemen- ses y los 5 años, con el 85% de los casos en
tarias por el riesgo de producir obstrucción menores de 3 años. Produce más muertes que
completa de la vía aérea. el crup y la epiglotitis juntas.

526
CAPÍTULO XVIII: OBSTRUCCIÓN AGUDA DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR

Los productos aspirados incluyen alimentos, técnicos. Las maniobras de expulsión que
especialmente semillas, frutos secos, y peque- deben realizarse en lactantes son golpes
ños juguetes. Pueden quedar ubicados desde interescapulares y golpes torácicos, y la ma-
la faringe hasta los bronquios. niobra de Heimlich: colocar las manos sobre
el epigastrio, una mano con el puño cerrado y
La presentación clínica de aspiración de un el pulgar hacia dentro y la otra mano rodean-
cuerpo extraño puede comenzar en forma do el puño y a continuación presionar 5 veces
brusca, con un episodio de atragantamiento sobre el epigastrio con movimientos rápidos
caracterizado por tos, náuseas, disnea y cia- dirigidos hacia atrás y hacia arriba.
nosis; también hay presentaciones más disi-
muladas, con episodios repetidos de atelec-
tasia, neumonía recurrente, sibilancias locali- OBSTRUCCIÓN POST-EXTUBACIÓN
zadas y tos persistente.
Constituye un problema más común en los pa-
Los signos y síntomas varían según el grado cientes pediátricos que en los adultos; la cau-
de obstrucción: si es incompleta habrá tos y sa fundamental es el edema laríngeo. El gra-
estridor inspiratorio; si es completa se produ- do de obstrucción varía según la extensión del
cirá asfixia severa y paro si no se desaloja edema y el diámetro de la laringe. Por ello, es
rápidamente el cuerpo extraño de la vía aérea más común en los lactantes y niños peque-
superior. ños, en los que edemas relativamente leves
obstruyen de modo significativo la vía aérea.
El diagnóstico se hace por la historia clínica
en 40 a 80% de los casos, la confirmación re- La incidencia de estridor post-extubación es
quiere radiografías y especialmente broncos- variable, entre el 5 y el 15% según diversas
copia. Si el estado del paciente lo permite, se estadísticas; la cifra aumenta hasta en una
toma radiografía lateral de cuello y de tórax tercera parte en los pacientes que sufren obs-
(que debe hacerse en inspiración y espiración) trucción de la vía aérea por traumatismos o
por si el cuerpo extraño es radioopaco. quemaduras; así mismo, es más frecuente en
los pacientes con Síndrome de Down.
Si la obstrucción es incompleta no se realizan
maniobras para intentar desobstruir la vía aé- El cuadro clínico depende de la gravedad de
rea, se coloca al niño en la posición en que se la obstrucción. Habitualmente, además del es-
encuentre más cómodo para respirar (habi- tridor puede apreciarse aleteo nasal, descen-
tualmente en posición de olfateo), se admi- so del movimiento de aire y retracciones, fun-
nistra oxigeno, se toman radiografías de cue- damentalmente supraesternales y esternales.
llo y tórax si lo permite, se avisa al otorrinola- En los casos más graves hay ansiedad exce-
ringólogo o al neumólogo para realizar bron- siva y puede haber alteración del sensorio y
coscopia, preferentemente con fibrobroncos- cianosis por descenso de la saturación arterial
copio flexible, procedimiento que permite lo- de oxígeno.
calizar y extraer el cuerpo extraño en la ma-
yoría de los casos. Puede presentarse hasta 3 horas después de
la extubación, por lo cual se debe tener en
Si la obstrucción es completa se inician ma- cuenta esta posibilidad, especialmente en
niobras de desobstrucción rápida de la vía pacientes con factores predisponentes. Pue-
aérea en el lugar del accidente, sin medios den requerirse radiografías de cuello y tórax

527
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

y en algunos casos broncoscopia. Las lesio- dor con las infecciones respiratorias. Las for-
nes visibles a la broncoscopia son edema, in- mas más severas de estenosis subglótica re-
flamación y en los casos más severos este- quieren tratamiento quirúrgico.
nosis subglótica y granulomas.

Como medidas terapéuticas deben conside- QUEMADURAS


rarse las siguientes:
Las lesiones térmicas de la vía aérea superior
• La adrenalina racémica ha demostrado pueden complicar la evolución y el tratamiento
efectividad, con disminución del edema por del paciente quemado. Los agentes que pro-
estimulación de los receptores alfa adre- vocan lesiones pueden ser químicos o térmi-
nérgicos que producen vasoconstricción lo- cos y entre estos últimos, llamas, humos y va-
cal. La respuesta se suele observar con ra- pores calientes. Las llamas afectan a la naso-
pidez si la obstrucción es debida a edema. faringe y laringe, raramente a la subglotis por
la gran rapidez en el enfriamiento. Los humos
• Los corticoides, especialmente la dexa- y vapores pueden afectar a la supraglotis, sub-
metasona, se han utilizado ampliamente glotis e incluso a vías aéreas distales, al igual
pero su eficacia se discute; sin embargo, que las sustancias químicas generadas por
parece mejorar el estridor post-extubación la combustión de sustancias naturales.
si se utilizan unas horas antes; los estudios
más recientes lanzan dudas sobre la utili- Se debe sospechar lesión de la vía aérea su-
dad de los corticoides en la prevención del perior en el paciente con quemaduras faciales
edema laríngeo. que tiene “chamuscados” los pelos de la nariz,
hollín en la mucosa nasal o en el esputo, afo-
En la mayoría de los casos el estridor es un nía, estridor inspiratorio y jadeo. Aunque el
proceso autolimitado que responde a medi- compromiso respiratorio puede no estar pre-
das conservadoras. Sin embargo, en algunos sente al ingreso, se puede desarrollar más
casos sin respuesta adecuada y cuando el pa- tarde, incluso hasta 72 horas después por
ciente presenta severa afectación, se debe aumento del edema en la vía aérea.
realizar intubación de urgencia, utilizando un
tubo endotraqueal de diámetro inferior al que Se puede acompañar a menudo de afección
corresponde a la edad del paciente, para pre- de la vía aérea inferior, así como de síntomas
venir el incremento de la lesión; el paciente secundarios a la intoxicación por gas carbó-
permanece intubado hasta que se aprecie nico; todo esto puede producir dificultad res-
fuga de aire alrededor del tubo con una pre- piratoria, cianosis y alteración de la conciencia.
sión ≤ 30 cm H2O.
Tratamiento: Se debe vigilar de cerca al pa-
En los casos en que es preciso realizar reintu- ciente que presenta quemaduras faciales im-
bación, y cuando se sospecha estenosis sub- portantes y signos de posible obstrucción de
glótica, se efectúa broncoscopia para explo- la vía aérea tras un incendio. Si el paciente
rar la vía aérea. La decisión de intubar nueva- muestra dificultad respiratoria se debe eva-
mente o de realizar traqueotomía depende de luar rápidamente. La radiografía de cuello y
los hallazgos. En el caso de que la estenosis el examen fibrobroncoscópico de laringe pue-
subglótica sea leve o moderada se toma acti- den mostrar tumefacción de los tejidos blan-
tud expectante; puede incrementarse el estri- dos, hallazgos que son indicación para intuba-

528
CAPÍTULO XVIII: OBSTRUCCIÓN AGUDA DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR

ción endotraqueal precoz antes de que ocurra de automóvil. Los signos clínicos del trauma
mayor obstrucción de la vía aérea. Sin em- laríngeo son: alteración de la fonación, ron-
bargo, es prudente no establecer la política quera, dolor al tragar, edema y enfisema sub-
de intubar a todos los pacientes con riesgo cutáneo del cuello; este último debe hacer sos-
potencial de obstrucción por quemaduras, ya pechar fractura de laringe o tráquea. En le-
que ello no está exento de complicaciones siones severas es fundamental establecer una
tanto por la intubación como después de la vía aérea artificial, en el trauma laríngeo es
extubación. La fibrobroncoscopia también indispensable la traqueotomía antes de efec-
permite eliminar bridas y pseudomembranas tuar la reparación quirúrgica de la laringe.
así como para valorar el edema post-
extubación.
EDEMA ANGIONEURÓTICO
La traqueostomía está indicada cuando hay
edema importante que impide la intubación. También denominado angioedema glótico o
edema de Quincke, se caracteriza por reac-
ción anafiláctica grave con edema que afecta
TRAUMA la cara, muy especialmente los párpados, la-
bios y los tejidos blandos del tracto respirato-
Los traumatismos orales y faciales pueden rio superior, por lo que puede provocar obs-
causar obstrucción por hemorragia en la vía trucción laríngea. En algunas ocasiones se
aérea o por edema de los tejidos blandos, asocia con otras complicaciones graves como
complicación esta última que puede aconte- broncoespasmo severo y shock anafiláctico.
cer hasta horas después del traumatismo por
lo que se requiere vigilancia clínica cuidado- Las causas son muy diversas; se destacan
sa y con frecuencia, radiografías y TAC. las secundarias a administración de medica-
mentos, ingestión de alimentos, picadura de
La intubación endotraqueal puede ser difícil; insectos, etc.
debe evitarse la sedación y la anestesia gene-
ral. En niños puede requerirse anestesia inha- Las medidas terapéuticas de emergencia son:
latoria. También se puede recurrir a la anes- oxígeno a alto flujo (10 a 15 L/min); adrenalina
tesia local para realizar laringoscopia; en mu- nebulizada, 0,5 a 1 ml de adrenalina al 1/1000
chos casos se requiere el broncoscopio flexi- en 3 a 4 ml de suero fisiológico; adrenalina
ble de fibra óptica para poder realizar la intu- por vía subcutánea o intramuscular en dosis
bación endotraqueal. de 10 µg /kg (0,1 ml/kg de adrenalina al 1/
10.000: diluir 1 ampolla de 1 ml en 9 ml de
Cuando la intervención quirúrgica incluye fijar agua destilada o suero fisiológico, o bien 0,01
con alambre la mandíbula al maxilar superior, ml/kg de adrenalina al 1/1000 es decir, adre-
al lado de la cama del paciente siempre de- nalina sin diluir). Si no hay mejoría clínica se
ben quedar disponibles instrumentos que per- puede repetir la dosis cada 5 a 20 minutos.
mitan cortar los alambres para abrir la vía aé- Antihistamínicos, que pueden repetirse cada
rea, debido a que puede producirse aspira- 4 horas hasta la desaparición de los síntomas.
ción endotraqueal por vómitos y OVAS. Excepcionalmente puede ser necesaria la
intubación endotraqueal y si ello fuera impo-
Las lesiones de laringe y tráquea pueden ocu- sible, punción traqueal, cricotiroidotomía o
rrir por utensilios penetrantes o en accidentes traqueostomía.

529
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MANEJO DE LA VÍA AÉREA para evitar complicaciones potenciales como


laceración o ruptura de viscera torácica o ab-
Ante una obstrucción parcial cualquier inter- dominal.
vención puede culminar en obstrucción total.
Se recomienda poca o ninguna manipulación En el paciente inconsciente, la obstrucción
mientras se mantenga adecuada ventilación, generalmente se debe a colapso supraglótico
hasta que el paciente llegue a un servicio de secundario a la caída de la lengua o la epíglotis
urgencias con todos los recursos técnicos hacia atrás en la garganta. Con sólo traccionar
necesarios. la mandíbula o mantener la lengua hacia ade-
lante con una cánula de Guedel (orofaríngea),
La reanimación tanto en adultos como en ni- se puede restablecer la permeabilidad de la
ños siempre comienza con una evaluación sis- vía aérea; el paciente consciente no tolera este
temática de la vía aérea. En el adulto, menos dispositivo, en cambio se puede colocar cá-
de la quinta parte de las muertes súbitas se nula nasofaríngea; pero ésta no se recomien-
deben a obstrucción de la vía aérea; las cau- da en pacientes con lesiones del tercio medio
sas usuales son cardiogénicas. Lo opuesto de la cara o de la base del cráneo, debido al
ocurre en los niños; por debajo de los 8 años riesgo de penetración inadvertida a la cavi-
la obstrucción laríngea de cualquier origen es dad craneana. También está contraindicada
la causa más frecuente de muerte súbita. en pacientes anticoagulados o con diátesis
hemorrágica.
Sea cual fuere el proceso subyacente, en un
paciente con dificultad respiratoria la vía aé-
rea debe ser evaluada tanto visual como por VENTILACIÓN CON MÁSCARA
palpación para asegurarse de que ningún
cuerpo extraño la bloquea. Dependiendo de En pacientes con obstrucción aguda de la vía
las circunstancias, el uso de laringoscopio rí- aérea, la ventilación con máscara puede ser
gido o flexible puede diagnosticar la causa de medida salvadora temporal. Infortunadamen-
la obstrucción y orientar el manejo. te, debido al escape alrededor de la máscara
y a la elasticidad de la orofaringe, la mayoría
En el caso de un niño consciente y parcialmen- del volumen corriente puede perderse dentro
te obstruido en quien se sospeche epiglotitis, de la vía aérea o en el tracto digestivo. La pér-
está contraindicada la laringoscopia. El larin- dida de volumen también está influida por el
goespasmo puede ser causado por ese exa- grado de obstrucción, la resistencia de los pul-
men en pacientes poco colaboradores. Adul- mones y del tórax y el flujo administrado. Una
tos con supraglotitis pueden usualmente tole- sola persona no puede ventilar un paciente
rarla sin que se provoque total obstrucción. adecuadamente en situaciones de emergen-
cia. Para realizar correcta ventilación y resu-
Para pacientes con obstrucción por cuerpo citación se requieren dos personas: una man-
extraño, la maniobra de Heimlich puede ser tiene la máscara y la cabeza en posición,
un procedimiento que salve la vida. Al forzar mientras la otra comprime la bolsa respirato-
el aire a salir de los pulmones, la compresión ria. Esta técnica está contraindicada cuando
abdominal subdiafragmática crea una “tos” se sospecha fractura de la base del cráneo,
artificial que puede expeler el material extra- debido a que las altas presiones de ventila-
ño. Se debe cuidar que la compresión se haga ción necesarias para sobrepasar la obstruc-
por encima del ombligo, en la línea media, ción pueden causar neumoencéfalo a tensión.

530
CAPÍTULO XVIII: OBSTRUCCIÓN AGUDA DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR

OTRAS TÉCNICAS NO INVASORAS Luego de la intubación, si aparece obstruc-


DE LA VÍA AÉREA ción inexplicable se deben iniciar evaluacio-
nes clínicas y radiológicas cuidadosas ante la
El uso de métodos alternativos no quirúrgicos posibilidad de cuerpo extraño en un bronquio.
para ventilar un paciente puede ser de valor
cuando no hay posibilidad de intubar. Se debe Son contraindicaciones relativas de la intuba-
limitar el número de intentos para manipular y ción endotraqueal: pacientes con trauma de
controlar la ventilación. El EOA (oesophageal columna cervical, macroglosia, micrognatia,
obturator airway), el EGTA (oesophageal trismus, manifiesta lesión de la vía aérea con
gastric tube airway), el PLT (pharyngotracheal comunicación a la piel, tumor laringeo masivo,
lumen airway), y el combitubo o ETC sangrado incontrolable, y heridas en la proxi-
(oesophageal-tracheal combitube) deberían midad de la laringe que causen disnea,
evitarse si hay alguien entrenado que pueda estridor, hemoptisis, y enfisema subcutáneo.
reliazar intubación definitiva. Los dispositivos
EOA y EGTA se asocian con alta incidencia En la mayoría de los casos, el juicio clínico
de complicaciones y proveen solo ventilación determina la posibilidad de intubación. En trau-
marginal. El PTL y el combitubo (ETC) pare- ma laríngeo el paciente puede requerir ciru-
cen promisorios. gía para sortear el daño.

INTUBACIÓN ENDOTRAQUEAL MÉTODOS INVASORES


O QUIRÚRGICOS
Es la intervención de elección. En manos ex-
pertas, es rápida y atraumática. En algunos La ventilación a chorro (“jet”) transtraqueal
casos de obstrucción, ésta se puede pasar con percutánea, la cricotiroidotomía y la traque-
el tubo endotraqueal para restablecer la ven- ostomia son métodos para acceder a la vía
tilación. El paciente con epiglotitis, parálisis aérea cuando los anteriormente mencionados
bilateral de cuerdas vocales o cuerpo extra- han fallado o no se consideran adecuados.
ño, puede obtener beneficio inmediato. Aun- En el orden anotado son factibles y cada vez
que restablecer la vía aérea es lo crítico, no requieren mayor entrenamiento y deben ser
se debe olvidar que luego de asegurar una realizados por personal experto. El cuadro a
vía aérea de emergencia, se debe diagnosti- continuación resume los métodos de ventila-
car la causa de obstrucción. ción en caso de obstrucción de la vía aérea:

INDICACIONES CONTRAINDICACIONES COMPLICACIONES


Maniobra de Heimlich Cuerpo extraño Obstrucción parcial Obstrucción total
Cánula Orofaríngea Paciente inconsciente, Trauma Paciente despierto, severa le- Puede fallar, o precipitar
u obstrucción nasal sión oral laringoespasmo reflejo.
Cánula nasofaríngea No tolerancia de la cánula Fractura de la base del craneo Epistaxis, trauma cerebral
orofaríngea
Ventlación con máscara Hipoventilación Fractura de la base del cráneo Ventilación inadecuada,
facial neumoencéfalo a tensión.

531
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

INDICACIONES CONTRAINDICACIONES COMPLICACIONES


Alternativas no invasivas Poca destreza en intubación Severa lesión oral, lesiones Hipoventilación
abiertas laríngeas
Intubación orotraqueal Falla en los métodos anteriores Severa lesión oral, lesiones Intubación esofágica, lesiones
abiertas laríngeas, lesión de la dentales, laríngeas, faríngeas
columna cervical, falta de des- y cervicales
treza del personal a cargo
Intubación nasotraqueal Severa lesión oral, lesión de la Fracturas de la base del cráneo Epistaxis, neomoencéfalo
columna cervical
Ventilación trantraqueal Falla de los métodos anteriores Lesiones abiertas laríngeas, Neumotórax,
percutánea falta de destreza del personal neumomediatino, enfisema
a cargo subcutáneo.
Cricotiroidotomía Falla de los métodos anteriores Lesiones abiertas laríngeas, Estenosis laríngea
crup, tumor laríngeo, falta de
destreza del personal a cargo.
Traqueostomía Trauma laríngeo, soporte venti- Falta de destreza del personal Neumotórax,
latorio a largo plazo. a cargo. neumomediatino, enfisema
subcutáneo, estenosis
traqueal, sangrado, parálisis
de cuerda vocal.

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Ala-kokko T, Kyllonen M, Nuutinen L. Management lation and heliox therapy. Int Anesthesiol Clin 2000;
of upper airway obstruction using a seldinger 38:161-187.
minitracheotomy kit. Acta Anaesthesiol Scand 8. Kearney K. Emergency: epiglottitis: often caused
1996: 40:385-388. by bacterial infection, this inflammation can indu-
2. Bauman RC, Mac Gregor DA. Dissection of the ce sudden airway obstruction. Ajn, American
posterior pharynx resulting in acute airway obstruc- Journal of Nursing 2001; 101:37-38.
tion. Anesthesiology 1995; 82:1516-1518. 9. King CJ, Davey AJ, Chandradeva K. Emergency
3. Bredshaw D. What are the nonsurgical treatment use the laryngeal mask airway in severe upper
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4. Crosby E, Reid D. Acute epiglottitis in the adult: is 10. Masters IB, Chang AB, Harris M, Oneil MC. Mo-
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intubation: noninvasive positive pressure venti- Lancet 1994; 344: 1743-1748.

532
CAPÍTULO XVIII: OBSTRUCCIÓN AGUDA DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR

14. Stallion A. Initial assessment and management of 16. Stroud RH, Friedman NR. An update on
pediatric trauma patient. Respir Care Clin N Am inflammatory disorders of the pediatric airway:
2001; 7:1-11. epiglottitis, croup, and tracheitis. Am J Otolaryngol
15. Stroud RH, Friedman NR. An update on 2001; 22:268-275
inflammatory disorders of the pediatric airway: 17. Thierbach AR, Lipp MDW. Airway management in
epiglottitis, croup, and tracheitis. Am J Otolaryngol. trauma patients. Anesthesiol Clin N Am 1999; 17:
2001; 22: 268-275. 63-82.

533
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIX

Bronquitis aguda

Rubén Contreras, MD.


Jefe de Urgencias
Clínica San Rafael
Bogotá

DEFINICIÓN FISIOPATOLOGÍA

L a bronquitis aguda es un término que defi-


ne la infección o inflamación del tracto res-
piratorio bajo, acompañada de tos con o sin
La bronquitis aguda se puede dividir en dos
fases:

expectoración. La tos aguda debe diferenciar- 1. Inoculación directa del epitelio tráqueo-
se de aquella que se presenta por lo menos bronquial por un virus o por un agente físi-
hasta por 3 semanas y en la que acuciosa- co-químico, polvo o alergeno, que lleva a
mente se han descartado como diagnóstico la liberación de citoquinas y células inflama-
diferencial la neumonía y el asma. torias. Esta fase se caracteriza por fiebre,
malestar general y dolor osteoarticular. Su
duración es de uno a cinco días, según el
EPIDEMIOLOGÍA germen causal.
2. Hipersensibilidad del árbol tráqueo-bron-
El 5% de los norteamericanos presenta un quial. La manifestación principal es la tos,
episodio de bronquitis por año, y más de 90% acompañada o no de flemas y sibilancias.
de las personas afectadas reciben atención La duración usual es de tres días, pero de-
médica, lo que representa más de 10.000.000 pende de la integridad del árbol-traqueo
de visitas anuales. La incidencia aproximada bronquial y de la hipersensibilidad propia
es de 4 por 1000 habitantes, y la mayoría se de cada individuo. El volumen espiratorio
desarrolla en personas sanas, con un costo forzado en el primer segundo (VEF1seg)
anual aproximado de 300 millones de dóla- disminuye transitoriamente. La infección
res. La presente guía está enfocada a los pa- bacteriana, por lo general, es producto de
cientes que no tienen comorbilidad (enferme- una infección viral previa.
dad pulmonar obstructiva crónica, insuficien-
cia cardiaca o inmunosupresión).
ETIOLOGÍA
En nuestro país no se dispone de estadísti-
cas confiables sobre esta entidad. Los microorganismos causantes de bronqui-
tis aguda son:

534
CAPÍTULO XIX: BRONQUITIS AGUDA

• Virus: 85-90% (Influenza B, Influenza A, diografía del tórax y la pulso-oximetría podrían


Parainfluenza 3, Sincicial respiratorio, co- ayudar a excluir un cuadro neumónico. Un pa-
rona virus, adenovirus y rhinovirus). ciente con frecuencia cardiaca no mayor de
• Mycoplasma pneumoniae: 2,5%. 100, frecuencia respiratoria no mayor de 24,
• Chlamydia pneumoniae: 2,5%. en ausencia de fiebre y sin signos auscultato-
• Bordetella pertussis: 2,5%. rios compatibles con neumonía, no requiere
otros estudios diagnósticos.
No hay evidencia en personas sanas de que
el Streptococcus pneumoniae, Haemophilus La solicitud de hemograma y otros exámenes
influenzae o Moraxella catharralis causen paraclínicos queda a consideración del médi-
bronquitis aguda, aunque podrían ocasionar co, recordando que en general no tienen valor
sobreinfección posterior a una infección viral. en el diagnóstico de la bronquitis aguda.

CUADRO CLÍNICO ATENCIÓN PRE-HOSPITALARIA


El cuadro clínico predominante de la bronqui- La atención prehospitalaria de la bronquitis
tis aguda es tos, generalmente por tres sema- aguda debe enfocarse al tratamiento sintomá-
nas o menos, con o sin expectoración, dolor tico con medicación usual, y a la recomenda-
torácico leve, sibilancias, fiebre no alta y de ción de informar signos de alarma tales como
corta duración, escalofríos (poco común) e irri- fiebre permanente, dificultad respiratoria, sibi-
tación de garganta. La expectoración purulen- lancias o producción de esputo purulento que
ta no necesariamente significa infección bacte- sugieren cuadro neumónico.
riana, sino que es más bien indicativa de reac-
ción inflamatoria.
TRATAMIENTO INICIAL
En el examen físico se observa taquicardia,
puede o no haber frecuencia respiratoria au- Los antibióticos no deben ser utilizados rutina-
mentada con o sin signos de dificultad respi- riamente en el manejo de la bronquitis aguda,
ratoria, inyección conjuntival y faringe conges- aunque son muchos los médicos que los pres-
tiva. En la auscultación pulmonar pueden en- criben, realmente en forma empírica e inade-
contrarse sibilancias y roncus, pero ningún sig- cuada.
no de consolidación pulmonar ni de derrame
pleural. El manejo es sintomático con las siguientes
medidas:

AYUDAS DIAGNÓSTICAS • Aumentar la ingesta de líquidos orales.


• Analgésicos, según necesidad en el con-
El cuadro clínico con las características arriba trol del malestar general.
enumeradas constituye la principal evidencia • Suspender el cigarrillo.
diagnóstica. Un cuadro viral instaurado, acom- • Antitusivos (destrometorfán o codeína).
pañado de síntomas respiratorios, tos con y
sin flemas, permite establecer el diagnóstico. Según el cuadro clínico, se podrían añadir
La evaluación del esputo puede ayudar a iden- broncodilatadores B2 de corta acción (salbu-
tificar un cuadro bacteriano agregado. La ra- tamol o albuterol).

535
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

No hay suficiente evidencia sobre el efecto persistencia de síntomas como la tos más allá
benéfico de los corticoides inhalados. de 3 semanas, o para investigar otras condi-
ciones que en ocasiones se ocultan, como el
El uso de antibióticos en la bronquitis aguda asma, el reflujo gastro-esofágico o la sinusitis.
ha sido motivo de múltiples revisiones y meta- Un caso para tener en cuenta es la infección
análisis. Como conclusión, se puede decir que por Bordetella pertussis, que puede imitar la
no se ha demostrado beneficio con su uso, y bronquitis aguda y posteriormente producir un
que más bien podrían aumentar la resisten- cuadro infeccioso severo.
cia bacteriana.

Los antibióticos podrían considerarse en las CRITERIOS DE REFERENCIA


siguientes situaciones:
Si se realiza un diagnóstico definido, la bron-
a. Tos productiva por más de dos semanas, quitis aguda no requiere referencia a menos
con síntomas de inflamación sistémica co- que existan complicaciones, como neumonía,
mo fiebre (sospecha de infección por como se explica arriba.
Bordetella pertussis).
b. Evidencia bacteriológica significativa. Es-
puto con más de 25 leucocitos por campo PRONÓSTICO
y menos de 10 células epiteliales en el es-
tudio microbiológico. El pronóstico de la bronquitis aguda es bue-
no, y lo usual es la resolución sin secuelas en
Los antibióticos podrían ser: amoxicilina (500 un periodo de 7-10 días, aunque la tos puede
mg cada 8 horas por 5 a 7 días), eritromicina durar hasta un mes. La mortalidad es rarísi-
(500 mg cada 6 horas por 5 a 7 días), trime- ma y está condicionada básicamente por
tropin-sulfametoxasol (160 mg/800 mg cada morbilidad asociada y complicaciones.
12 horas por 5 a 7 días) o doxiciclina (100 mg
cada 12 horas por 5 a 7 días).
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
Los antivirales anti-influenza, como los inhi-
bidores de neuroaminidasa o la amantadina Aunque la inmunización contra la influenza no
o rivabirina, no están indicados en el trata- es recomendada en toda la población, debería
miento de la bronquitis aguda. tenerse en cuenta para los individuos con fac-
tores de riesgo como edad mayor de 65 años.

TRATAMIENTO La disminución del contagio del virus con me-


INTERDISCIPLINARIO didas tan simples como el lavado de manos,
el uso de máscaras (tapabocas), evitar el con-
Establecido el diagnóstico de bronquitis agu- tacto y campañas de salubridad y educación
da, el tratamiento interdisciplinario sólo queda son eficaces, especialmente en épocas de
indicado en el paciente con complicaciones epidemia.
como neumonía, o en quien se debe evaluar
la necesidad de manejo hospitalario por me- Se deben evitar a toda costa los cambios brus-
dicina interna o por neumología. También está cos de temperatura, en particular el frío y la
indicada la consulta con un especialista si hay humedad ambiental, que junto con la conta-

536
CAPÍTULO XIX: BRONQUITIS AGUDA

minación ambiental, hacen más susceptibles LECTURAS RECOMENDADAS


a las personas a desarrollar un episodio de
bronquitis aguda. 1. Edmonds, ML. Antibiotic treatment for acute
bronchitis Ann Emerg Med 2002; 40:110-112.
2. Gonzales R, Sande MA. Uncomplicated acute
bronchitis. Ann Intern Med 2000; 133:981-991.
3. Hirschmann JV, Antibiotics for common respiratory
tract infections in adults Arch Intern Med 2002;
162:256-264.
4. Smucny J, Fahey T, Becker L. Antibiotics for acute
bronchitis. Cochrane Data base Syst Rev 2000;
(4): CD 00024.

537
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XX

Exacerbación aguda de la enfermedad pulmonar


obstructiva crónica - EPOC

Rafael Acero Colmenares, MD


Medicina Interna, Neumología
Jefe de Neumología
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPOC

L a enfermedad pulmonar obstructiva cróni-


ca (EPOC) es una patología frecuente. En
los Estados Unidos representa la cuarta causa
La enfermedad no tiene manifestaciones clí-
nicas uniformes, en algunos individuos se ini-
cia por tos, expectoración (“tos de fumador”)
de muerte, genera 16 millones de consultas o “gripas” frecuentes asociadas a tos y expec-
médicas y 500.000 hospitalizaciones por año. toración; en otros la primera manifestación es
Los pacientes con EPOC presentan 1 a 3 exa- disnea o una espirometría anormal.
cerbaciones al año, 3-16% de ellas requieren
hospitalización presentando un deterioro tem- Para establecer el diagnóstico de EPOC todos
poral de la función pulmonar y de la calidad los pacientes deben tener una espirometría
de vida que puede tomar 30 a 90 días en re- que demuestra la obstrucción (VEF1 < 80% y
cuperarse. La mortalidad de las exacerbacio- relación VEF1/CVF < 70%) que no mejora con
nes varía del 3 - 10% en EPOC severo; cuando el broncodilatador.
se requiere UCI es de 15 a 24%, y mayor de
30% en los pacientes de más de 65 años. La La enfermedad evoluciona con aumento pro-
mortalidad a180 días, uno y dos años des- gresivo de la obstrucción, disminución progre-
pués de la exacerbación es 13,4%, 22% y siva del VEF1 que se ha cuantificado en pro-
35,6% respectivamente. medio en 42 a 48 mL al año (SD 99 mL/año).
La disnea, limitación funcional, hipoxemia,
Como EPOC se agrupan varias enfermeda- hipercapnia y el atrapamiento de aire, en ge-
des caracterizadas por obstrucción crónica, neral no se presentan hasta que se ha desa-
difusa, irreversible y progresiva de las vías rrollado una obstrucción significativa (VEF1 <
aéreas, asociada a una respuesta inflamatoria 50% del predicho). Igualmente, el compromi-
anormal del pulmón; incluye: enfisema, bron- so de otros órganos (hipertensión pulmonar,
quitis crónica obstructiva y el asma crónica Cor pulmonale, músculos periféricos), las exa-
irreversible del adulto. cerbaciones y las hospitalizaciones recurren-
tes se presentan en los pacientes con lesión
pulmonar avanzada.

538
CAPÍTULO XX: EXACERBACIÓN AGUDA DE LA ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA - EPOC

CLASIFICACIÓN DE LA EPOC
CARACTERÍSTICA LEVE MODERADO SEVERO
VEF1 > 50% 35 – 50 % < 35%
disnea leve o ausente moderada severa
exacerbaciones raras < 4 año > 4 año
hipoxemia/hipercapnia no si severa
hipertensión pulmonar no no - si si
cor pulmonale

FISIOPATOLOGÍA DE LA EPOC rante la espiración causando obstrucción al


flujo espiratorio y atrapamiento de aire.
Las alteraciones histopatológicas de la EPOC
se localizan en tres zonas: bronquios, bron- Estas alteraciones anatómicas determinan las
quiolos y parénquima pulmonar: alteraciones funcionales y clínicas de la
EPOC:
1. Bronquio: inflamación y engrosamiento de
la pared bronquial, hiperplasia de glándu- 1. Inflamación bronquial e hipersecreción de
las mucosas y células caliciformes, meta- moco que se asocian a tos, expectoración.
plasia escamosa 2. Obstrucción al flujo espiratorio: disminución
2. Bronquiolos: inflamación crónica con infil- de la relación VEF1 /CVF, disminución pro-
trado mononuclear, metaplasia mucosa, gresiva del VEF1 en la espirometría.
aumento de la masa muscular, fibrosis peri- 3. Aumento de la distensibilidad pulmonar e
bronquiolar, pérdida de las uniones alveola- hiperinflación con aumento de la capaci-
res y formación de tapones de moco. dad pulmonar total (CPT).
3. Septos alveolares: destrucción de los sep- 4. Atrapamiento de aire durante la espiración
tos alveolares que causa perdida del tejido que se manifiesta en aumento del volumen
de sostén de las vías aéreas. residual (VR), capacidad funcional residual
(CFR) y relación VR/CPT en reposo.
La lesión de los bronquios causa hipersecre- 5. Hiperinflación dinámica durante el ejerci-
ción de moco y tos, pero prácticamente no cio por atrapamiento de aire progresivo con
contribuye a la obstrucción de la vía aérea, la aumento de la CFR y disminución de la ca-
cual es producida principalmente por la bron- pacidad inspiratoria.
quiolitis y la perdida del tejido de sostén. La 6. Trastornos en la relación V/Q, hipoxemia,
bronquiolitis y los tapones de moco parecen hipercapnia.
ser la principal causa de obstrucción al flujo 7. Disfunción del diafragma secundario a
espiratorio en el enfisema leve a moderado. hiperinflación.
La perdida de los septos alveolares disminu- 8. Hipertensión pulmonar, Cor pulmonale
ye el tejido elástico pulmonar y aumenta de la
distensibilidad; la destrucción de los septos Hay otra serie de manifestaciones extrapul-
que rodean las pequeñas vías que normal- monares que han llevado a considerar la
mente ejercen tracción de sus paredes no EPOC como una enfermedad sistémica. Es-
cartilaginosas, hace que éstas se cierren du- tas alteraciones son producidas por múltiples

539
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

factores, inflamación sistémica asociada a la tener al menos una de las siguientes condicio-
EPOC, drogas usadas en el tratamiento (este- nes: infección del tracto respiratorio superior
roides), desnutrición: en los últimos cinco días, fiebre sin otra causa
aparente, aumento de las sibilancias, aumento
1. Disfunción de músculos esqueléticos que de la tos, o aumento de la frecuencia respira-
contribuye a la limitación funcional. toria, o de la frecuencia cardiaca mas de 20%
2. Pérdida de peso, pérdida de la masa mus- de lo usual.
cular.

ETIOLOGÍA
EXACERBACIÓN AGUDA DE EPOC
La literatura actual dice que cerca de 80% de
La exacerbación es el empeoramiento de los las exacerbaciones son a causa de infeccio-
síntomas basales, de inicio agudo, sostenido, nes, 40-50% de ellas de origen bacteriano,
más severo que las variaciones diarias usua- 30% por virus y 5-10% por bacterias atípicas.
les y que requiere de cambio de la medicación. La infección por más de un germen ocurre en
Clásicamente se ha definido como aumento 10-20% de los casos. Algunos datos epide-
de la disnea, del volumen y de la purulencia miológicos relacionan las exacerbaciones con
del esputo. Se clasifica en severa cuando es- aumento de la polución ambiental, SO 2, NO2,
tán presentes los tres síntomas, moderada si y ozono. El TEP, falla cardiaca y neumotórax
se registran dos y leve en los casos en que pueden simular o desencadenar exacerba-
sólo se presenta uno de ellos. Además, debe ciones.

CAUSAS INFECCIOSAS
BACTERIAS VIRUS ATÍPICAS
Haemophilus influenzae Rhinovirus (gripa) Chlamydia pneumoniae
Moraxella catharralis Influenza Micoplasma pmeumoniae
Streptococcus pneumoniae Parainfluenza Legionella
Pseudomona aeruginosa Coronavirus
Enterobacteriaceae Adenovirus
Haemophilus parainfluenzae Virus sincitial respatorio

MANEJO DE LA EXACERBACIÓN
En la evaluación de pacientes en urgencias rios estudios han confirmado que los pacien-
es muy importante identificar exacerbaciones tes con menor VEF1,PaO2 y pH con mayor
severas o con riesgo de paro cardiorespira- PaCO2, quienes reciben dosis mayores de
torio para iniciar medidas urgentes y además broncodilatadores, los pacientes con oxígeno
tratar de predecir quiénes requieren hospitali- en casa y con exacerbaciones recurrentes son
zación, bien por la severidad de la enfermedad quienes tienen mayor probabilidad de regre-
o por el riesgo de evolución inadecuada. Va- sar a urgencias en las dos semanas siguientes

540
CAPÍTULO XX: EXACERBACIÓN AGUDA DE LA ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA - EPOC

si se manejan ambulatoriamente. Sin embargo signos de falla cardiaca derecha, cambios de


no hay un modelo de predicción que pueda conciencia.
ser usado en la práctica clínica.

Una vez ingresa el paciente se inicia el pro- COMORBILIDAD


ceso de evaluación y tratamiento en forma si-
multánea y ordenada: Evaluar enfermedades asociadas que pueden
influir en el tratamiento o ser causas desenca-
1. Evaluación inicial para definir: denantes de la exacerbación: falla cardiaca,
a. Enfermedad actual, severidad y causa arritmias, neumonía, tromboembolismo pul-
de la descompensación. monar, neumotórax, diabetes, medicamentos
b. Severidad de la enfermedad previa. hipnóticos o sedantes.
c. Necesidad de ventilación mecánica.
2. Tratamiento: oxígeno, broncodilatadores,
esteroides, antibióticos. EXÁMENES PARACLÍNICOS
3. Respuesta al tratamiento.
4. Indicación de hospitalización, cuidado in- a. Cuadro hemático, glicemia, electrolitos,
tensivo, ventilación mecánica. creatinina, electrocardiograma.
5. Criterios de egreso. b. Radiografía del tórax: siempre se debe to-
mar una radiografía del tórax; en 16 - 21%
de los casos muestran una anormalidad
EVALUACIÓN INICIAL que justifica cambios en el manejo.
c. Gases arteriales: se deben tomar en todos
HISTORIA CLÍNICA los pacientes con exacerbación; son de
mucha ayuda para evaluar severidad de
Evalúa la severidad de la enfermedad pulmo- la exacerbación; la oximetría cutánea in-
nar previa con especial énfasis en el estado forma sobre la SaO 2, pero no sobre la
funcional, actividad física, limitación para el PaCO2 y pH que son necesarios para eva-
ejercicio, disnea en las actividades de la vida luar la EPOC.
diaria, tos, la expectoración, sus característi- d. Espirometría y Flujo espiratorio máximo: no
cas y los cambios que se han presentado en hay evidencia que permita recomendar el
la enfermedad actual hasta el momento del uso del VEF1 o del FEM como marcado-
ingreso. Además de medicación que recibe, res de severidad de la exacerbación de
historia y frecuencia de exacerbaciones pre- EPOC, ni como guía del tratamiento.
vias. Si es posible revisar la espirometría y
los gases arteriales previos.
SIGNOS DE EXACERBACIÓN SEVERA
EXAMEN FÍSICO Historia: historia de EPOC severo, exacerba-
ciones recurrentes, exacerbación de evolución
Buscar con detalle la temperatura, frecuencia prolongada, uso de dosis altas de broncodila-
respiratoria, frecuencia y ritmo cardiaco, es- tadores.
tabilidad hemodinámica, cianosis, uso de
músculos accesorios, movimiento paradójico Signos clínicos: disnea de reposo, FC > 110 x
del abdomen, edema de miembros inferiores, min, FR > 30 x min., uso de músculos acce-

541
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sorios, movimiento paradójico del abdomen, precaución y control frecuente de gases


arritmia cardiaca de aparición reciente, falla arteriales.
cardiaca, edema, inestabilidad hemodinámica,
cambios de conciencia.
BRONCODILATADORES
Gases arteriales: la hipoxemia severa (< 50
mmHg a nivel del mar, 40 mmHg en Bogotá) Catorce experimentos clínicos aleatorizados
y la hipercapnia acompañada de pH menor muestran que los anticolinérgicos y los b2
de 7,30 son signos de compromiso severo de agonistas inhalados son igualmente eficaces
la función pulmonar. en los pacientes con exacerbación de EPOC;
siendo superiores a las xantinas y a los b2
adrenergicos parenterales. La administración
INDICACIONES DE VENTILACIÓN se puede hacer por micronebulización o con
MECÁNICA inhaladores de dosis medida utilizando espa-
ciadores o inhalaocamaras para asegurar el
• Disnea severa con uso de músculos acce- uso adecuado.
sorios y movimiento paradójico del abdomen.
• Taquipnea persistente, Frecuencia respira- Si no hay respuesta al tratamiento después
toria > 35 x min. de alcanzar la dosis máxima del broncodilata-
• Hipoxemia severa que no mejora (PaO 2 < dor elegido, preferiblemente un b2agonista, se
40 mmHg). agrega un segundo broncodilatador (bromuro
• Acidemia severa (pH < 7,25) con hiper- de ipratropium). Como los anticolinérgicos tie-
capnia. nen menos efectos secundarios cardiovascu-
• Depresión del estado mental (somnolencia, lares se puede iniciar con bromuro ipratropium
estupor). en pacientes con arritmia cardiaca, enferme-
dad coronaria o falla ventricular izquierda.

TRATAMIENTO Agregar metilxantinas, aminofilina, teofilina, al


tratamiento no mejora el VEF1 y causa efec-
OXÍGENO tos secundarios importantes (náuseas, vómi-
to, arritmias, convulsiones). La literatura no ha
El uso de oxígeno es indiscutido en el manejo podido demostrar su utilidad en el manejo de
de la exacerbación; mejora la oxigenación la exacerbación. No se recomienda el uso ru-
tisular, disminuye la hipertensión pulmonar, la tinario de las metilxantinas en la exacerbación
sobrecarga cardiaca y la disnea. Se debe ini- aguda de la EPOC.
ciar tan pronto llega el paciente con cánula
nasal 2 L x min o por Ventury al 35% o menos Se inicia con b2 inhalado en nebulización o
aumentándolo si es necesario para asegurar con inhalador de dosis medida (con espacia-
una SaO2 cercana al 90%. dor o inhalo cámara) cada 30 a 60 minutos,
controlando la frecuencia cardiaca y la apari-
Los pacientes con hipoxemia e hipercapnia y ción de arritmias; si no hay mejoría se puede
pH ácido tienen mayor riesgo de desarrollar aumentar la dosis o agregar bromuro de ipra-
retención de CO2 con la administración de frac- tropium. Una vez se ha controlado la crisis se
ciones inspiradas altas de oxígeno; por lo que deja la medicación cada 4 horas y posterior-
en estos casos se debe aumentar la FiO 2 con mente cada 6 horas.

542
CAPÍTULO XX: EXACERBACIÓN AGUDA DE LA ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA - EPOC

DOSIS DE BRONCODILATADORES

MEDICACIÓN DOSIS x PUFF INHALADOR NEBULIZADOR


No INHALACIONES (DOSIS x MNB)
SALBUTAMOL 0,01 mg 1 a 2 c/ 4 a 6 horas 2,5 mg
METAPROTERENOL (Alupent) 0,65 mg 1 a 2 c/ 3 a 4 horas 10 - 15 mg
PIRBUTEROL (Maxair) 0,20 mg 1 a 2 c/ 4 a 6 horas _____
TERBUTALINA 0,20 mg 2 c/ 4 a 6 horas 0,25 a 0,5 mg
BROMURO IPRATROPIUM 0,02 mg 4 a 8 c/ 4 a 6 horas 0,25 a 0,5 mg

ESTEROIDES ciclinas, eritromicina y antes de la aparición


de gérmenes multirresistentes.
La literatura muestra que los corticoesteroides
orales o parenterales mejoran la evolución de Dos guías basadas en revisiones sistemáticas
la función pulmonar, del VEF1, de la PaO2, de de la literatura reportan que hasta el momento
la disnea y disminuyen la frecuencia de recaída. no hay estudios que demuestren que los nue-
La dosis y el tiempo de uso no ésta claro, pero vos antibióticos de amplio espectro son mejores
los estudios muestran que el resultado final es que los usados en los estudios iniciales; sin
igual usándolos durante 8 o 15 días. embargo, esas publicaciones se hicieron antes
de la aparición de gérmenes multiresistentes
Se deben iniciar al ingreso del paciente y con- existiendo estudios que muestran que los pa-
tinuar por 10 a 15 días; los pacientes que re- cientes con VEF1 menor de 50% y exacerba-
ciben esteroides orales crónicamente deben ciones frecuentes tienen más probabilidad de
continuar la dosis usual. tener Haemophilus influenzae y Pseudomona
aeruginosa y gérmenes resistentes.
Las dosis son:
• Prednisolona 40 mg día por 10 días. El uso de antibiótico, en ausencia de neumo-
• Metilprednisolona 0,5 mg /kg, IV c/6h por nía u otra indicación clara, se basa en la pre-
tres días, luego dosis bajas por 8 a 10 días sencia de esputo purulento y se selecciona
mas. de acuerdo a la gravedad de la enfermedad,
la frecuencia de exacerbaciones previas y la
frecuencia de gérmenes resistentes en el área:
ANTIBIÓTICOS 1. EPOC leve VEF1 > 50%, pocas exacerba-
ciones: cefalosporinas de segunda gene-
Once experimentos clínicos, controlados, ración o nuevos macrolidos.
aleatorizados muestran que los antibióticos 2. EPOC moderado VEF1 35 – 50%: beta-
son útiles en el tratamiento de las exacerba- lactamicos + inhibidor de betalactamasas,
ciones acompañadas de signos sugestivos de quinolonas activas contra el neumococo.
infección o clasificadas como severas (aumen- 3. EPOC severo VEF1 < 35% + exacerbacio-
to de la disnea, aumento del volumen y de la nes recurrentes: ciprofloxacina, o quinolonas
purulencia del esputo). Estos estudios se hi- activas contra el neumococo o betalacta-
cieron con amoxacilina, trimetropin sulfa, tetra- micos + inhibidor de betalactamasas.

543
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ANTIBIÓTICO DOSIS DÍAS DE TRATAMIENTO


CEFUROXIMA AXETIL 500 mg C/12h 10
CLARITROMICINA 500 mg c/12h 10
AZITROMICINA 500 mg, luego 250 mg /día 5
MOXIFLOXACINO 400 mg /día 5
LEVOFLOXACINO 500 mg día 7
CIPROFLOXACINO 500 mg c/12 horas 10 a 14

MUCOLÍTICOS Si hay mejoría se aumenta el tiempo entre


cada dosis de broncodilatador, cada 4 horas
Cinco estudios aleatorizados no muestran uti- y luego cada 6 horas.
lidad de los mucolíticos en el manejo de las
exacerbaciones Si no hay mejoría con el tratamiento:
1. Trasladar el paciente a la unidad de cuida-
do intensivo.
FISIOTERAPIA DEL TÓRAX 2. Bajo supervisión médica y monitoria
electrocardiográfica se aumenta la dosis de
Tres estudios aleatorizados muestran que la b2 y bromuro de ipratropium y se continúa
percusión del tórax durante las exacerbacio- administrando cada 30 a 60 minutos.
nes no mejora los síntomas ni el VEF1, y en 3. Buscar otras causas de la falta de respues-
un estudio empeoro el VEF1. ta al tratamiento: enfermedades asociadas,
trombo embolismo pulmonar, edema
pulmonar, neumotórax, neumonía etc.
RESPUESTA AL TRATAMIENTO 4. Si se dispone de recursos se puede consi-
derar el inicio de ventilación mecánica no
La mejoría se manifiesta por disminución de invasiva.
la disnea, de la frecuencia respiratoria, mejoría
en la movilización de aire y disminución del
uso de músculos accesorios. VENTILACIÓN MECÁNICA
NO INVASIVA
Se deben tomar gases arteriales de control
30 a 60 minutos después de iniciado el trata- Cinco estudios aleatorizados, cinco estudios
miento para evaluar la oxigenación, y la evo- observacionales y un meta-analisis han mos-
lución de la PaCO 2 y pH. La frecuencia trado que la ventilación mecánica no invasiva
cardiaca no es un buen indicador de mejoría en pacientes con exacerbación de EPOC dis-
pues usualmente persiste la taquicardia por minuye la probabilidad de falla respiratoria, la
el uso de los b2agonistas, pero si es muy alta necesidad de intubación y posiblemente au-
se puede mezclar Bromuro de Ipratropium y mente la sobrevida. Sin embargo, no hay cri-
bajar la dosis de los b2agonistas. terios para seleccionar los pacientes que se
benefician de esta terapia. Los pacientes que
No es necesario medir el VEF1 ni el pico flujo. presenten deterioro clínico a pesar del trata-
miento y no tengan contraindicaciones se

544
CAPÍTULO XX: EXACERBACIÓN AGUDA DE LA ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA - EPOC

deben considerar para iniciar ventilación no 2. Necesita broncodilatadores cada 4 horas


invasiva. o más.
3. El paciente entiende y puede seguir ade-
cuadamente el tratamiento.
INDICACIONES PARA HOSPITALIZAR 4. En caso de hipoxemia moderada (no se-
vera), debe tener oxígeno en casa.
1. Enfermedad de base severa. 5. El paciente puede asistir a control en los
2. Aumento severo de los síntomas. próximos días.
3. Exacerbación con tiempo de evolución pro-
longado. LECTURAS RECOMENDADAS
4. Disnea que lo limita para caminar de una
habitación a otra, comer o hablar. 1. Hafner J, Thomas J. Enfermedad pulmonar obs-
5. Presencia de otra enfermedad agravante: tructiva cronica: nuevos enfoques. Trib Médica
neumonía, TEP, arritmias, falla cardiaca. 1999; 99:15-28.
2. Mc Crory D, Brown C,Gelfand S, Bach P. Mana-
6. Cor pulmonale descompensado.
gement of acute exacerbation of CPOD. A summa-
7. Soporte inadecuado para manejo en casa. ry and appraisal of published evidence. Chest.
8. No respuesta al tratamiento inicial. 2001; 119:1190 – 09.
3. Pauwels RA, Buist S, Calverley P on behalf of the
GOLD Scientific Committee Global Strategy for the
INDICACIONES PARA HOSPITALIZAR Diagnosis, Management, and Prevention of Chro-
nic Obstructive Pulmonary Disease NHLBI/WHO
EN CUIDADO INTENSIVO Global Initiative for Chronic Obstructive Lung
Disease (GOLD)Am J Respir Crit Care Med.2001;
1. Disnea severa que no mejora con el trata- 163:1256–76. Internet: www.goldcopd.com
miento. 4. Recomendaciones de la ALAT sobre la exacerba-
2. Cambios de conciencia, confusión, letargia. ción infecciosa de la EPOC. Grupo de trabajo de
3. Signos de fatiga diafragmática. la Asociación Latinoamericana del tórax. Arch
4. Hipoxemia severa a pesar del oxígeno: Bronconeumol.2001; 37:349–57.
PaO2< 50 mmHg nivel del mar, < 40 mmHg 5. Snow V, Lascher F, Mottur-Pilson C, et al. The
Bogotá. evidence Base management of acute exacerbation
of COPD. Clinical practice guideline. Chest.2001;
5. Hipercapnia con pH < 7,30.
11: 1185–89.
6. Soto F, Varkey B. Evidence based approach to
acute exacerbations of COPD. Curr Opin Pulm
CRITERIOS DE EGRESO Med. 2003; 9:117 – 24
7. VHA/DOD clinical practice guideline for the mana-
1. Ausencia de signos de exacerbación se- gement of chronic obstructive pulmonary disease.
vera o criterios para hospitalizar. National guideline clearinghouse. www.guideline.gov

545
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXI

Asma bronquial

Alvaro Morales, MD
Sección de Neumología
Fundacion Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

L a siguiente es la definición adoptada por


consensos mundiales sobre el manejo de
la enfermedad. “Asma: enfermedad inflama-
contractilidad del músculo liso de las vías aé-
reas en respuesta a múltiples estímulos bron-
co-constrictores. Estudios durante los últimos
toria crónica de las vías aéreas activada por 10 años confirman que la reducción en el diá-
diferentes células o pruductos celulares. La metro de las vías aéreas no solamente es se-
hiperreactividad bronquial causa la inflama- cundaria a un efecto bronco-constrictor, sino
ción bronquial que desencadena episodios que contribuyen otros factores como aumento
recurrentes de respiración sibilante, disnea, de la permeabilidad de los capilares de la mu-
opresión torácica y tos, especialmente en ho- cosa bronquial, edema de la pared bronquial,
ras tempranas de la mañana y en las noches. infiltración por células inflamatorias y aumen-
Hay obstrucción generalizada en grado varia- to en la cantidad de secreciones bronquiales
ble del flujo aéreo, la cual es reversible, en con taponamiento de las pequeñas vías aé-
forma espontánea o como consecuencia del reas. Este proceso inflamatorio responde muy
tratamiento médico”. pobre y lentamente a medicamentos bronco-
dilatadores. Hay un consenso general en que
En resumen, es una enfermedad pulmonar la inflamación es el principal componente del
con las siguientes características: proceso asmático y que el tratamiento debe
1. Obstrucción de las vías aéreas “general- ser orientado a su control. Todos los expertos
mente” reversible en forma espontánea o y consensos recientes reconocen la importan-
como resultado del tratamiento médico. cia de la utilización de terapia antiinflamatoria
2. Inflamación en grado variable de las vías con esteroides en prácticamente todos los
aéreas. grados de severidad de presentación del asma
3. Aumento en el grado de respuesta de las bronquial. Los esteroides no deben ser reser-
vías aéreas a diferentes estímulos exter- vados únicamente para el manejo de los cua-
nos (= “hiper-reactividad bronquial”). dros severos, ya que su gran utilidad está
demostrada hasta en grados leves de la en-
fermedad con la utilización de sus presen-
FISIOPATOLOGÍA taciones en forma inhalada.

Anteriormente el asma se consideraba una La inflamación en el asma es compleja y en


enfermedad en la cual había aumento en la ella participan múltiples células y mediadores.

546
CAPÍTULO XXI: ASMA BRONQUIAL

Células reconocidas como inflamatorias e CLASIFICACIÓN


inmunogénicas como linfocitos, macrófagos,
eosinófilos, mastocitos, neutrófilos y otras Durante años el asma se ha tratado de clasi-
células denominadas propias o residentes del ficar de acuerdo a su etiología, especialmen-
pulmón con un potencial inflamatorio como las te relacionando la sensibilización a agentes
del epitelio bronquial y del endotelio vascular, presentes en el ambiente, pero desafortuna-
liberan y producen múltiples substancias pro- damente este método encuentra individuos en
inflamatorias como: Interleuquinas (IL), IL-2, los cuales no se demuestran factores ambien-
IL-2, IL-3, IL-4, IL-5, IL-6, IL-10, IL-12, IL-13, tales, denominándose esta variedad como “in-
factores estimulantes de formación de colo- trínseca” o idiopática, mientras que aquellos
nias de macrófagos-granulocitos (GM-CSF), que además presentan atopia, historia fami-
factores de necrosis tumoral, superóxidos, liar, elevadas cifras de IgE y aumento de eosi-
proteína básica mayor de los eosinófilos, hista- nófilos, se agrupan en la variedad de asma
mina, triptasa, prostaglandinas, leucotrienos, extrínseca o alérgica. Recientemente se ha
factores activadores de plaquetas, moléculas reconocido un tercer grupo denominado asma
de adhesión (ICAM-1–VCAM 1) y selectinas. ocupacional, al que pertenecen aquellos indi-
viduos que se han sensibilizado a un agente
Los linfocitos T CD4 aparecen como los que presente en el ambiente de trabajo y que no
desempeñan un papel determinante en des- eran asmáticos previamente.
encadenar y coordinar el proceso inflamato-
rio; interleuquinas producidas por estas célu- En el año 1992 se publicó el informe oficial
las son responsables de la diferenciación, sín- del Consenso Internacional sobre el Diagnós-
tesis, quimiotaxis y activación de los eosinó- tico y Tratamiento del Asma, el cual definió
filos, presentes en gran cantidad en las secre- claramente la gran importancia de clasificar
ciones bronquiales, nasales y en la sangre de el asma según el grado de severidad de la
las personas que presentan un proceso infla- obstrucción de las vías aéreas, puesto que así
matorio asmático. El éxito observado con la se va a determinar el manejo farmacológico a
utilización de esteroides redunda en su habi- seguir, y definió tres grados de severidad. Pos-
lidad para controlar y regular el proceso de- teriormente, en enero de 1995, el Instituto
nominado “cascada inflamatoria” siempre pre- Nacional de Salud de los Estados Unidos re-
sente en la reacción asmática. visó dicho documento y publicó el llamado
“Global Initiative for Asthma” (GINA) el cual
La falta de actividad antiinflamatoria de los se actualiza periódicamente, siendo su última
anti-histaminicos y de medicamentos anti- versión la publicada en el año 2002, la cual
leucotrienos de primera generación sugiere define cuatro grados de severidad. El trata-
que el control de un solo mecanismo, de los miento correspondiente a cada nivel de seve-
múltiples presentes en la reacción inflamatoria ridad se ha definido también que debe ser
asmática, carece de verdadera utilidad clíni- variable y progresivo y se ha denominado
ca en el manejo del paciente asmático. Manejo o Tratamiento Escalonado:

547
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ASMA: CLASIFICACIÓN

ASMA LEVE INTERMITENTE


- Síntomas intermitentes cortos <1 vez/semana
- Síntomas nocturnos cortos no más de 2 veces/mes
- Asintomático entre uno y otro episodio
- Flujo Pico & VEF1 >80%
- Variaciones de Flujo Pico & VEF1 < 20%

ASMA LEVE PERSISTENTE


- Síntomas persistentes >1 vez por semana
- Síntomas <1 vez por día
- Síntomas que pueden alterar la actividad diaria & sueño
- Síntomas nocturnos >2 veces por mes
- Flujo Pico & VEF1 >80%
- Variaciones de Flujo Pico & VEF1 20-30%

ASMA MODERADA PERSISTENTE


- Síntomas diarios persistentes
- Síntomas que alteran actividad diaria y sueño
- Síntomas nocturnos >1 vez por semana
- Uso diario de B2 agonistas de acción corta
- Flujo Pico & VEF1 60-80%
- Variaciones de Flujo Pico & VEF1 >30%

ASMA SEVERA PERSISTENTE


- Síntomas permanentes
- Episodios agudos frecuentes
- Síntomas nocturnos muy frecuentes
- Actividad física diaria limitada por el asma
- Flujo Pico & VEF1 < 60%
- Variaciones de Flujo Pico & VEF1 >30%

TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
Los medicamentos útiles en el manejo del piración sibilante. “Alivian síntomas” (“de ac-
asma se han clasificado en dos tipos: Alivia- ción inmediata” o “de rescate”).
dores y Controladores.
CONTROLADORES
ALIVIADORES
Se administran diariamente por periodos prolon-
Actúan rápidamente para mejorar el bronco- gados para mantener el asma “controlada” (“pro-
espasmo, la tos, la opresión torácica y la res- filácticos”, “preventivos”, “de mantenimiento”).

548
CAPÍTULO XXI: ASMA BRONQUIAL

Medicamentos controladores: estas subs- El cromoglicato de sodio puede usarse en las


tancias deben administrarse diariamente en etapas tempranas del asma porque reduce los
forma permanente para mantener al asma síntomas y la frecuencia de los episodios, y
bajo control; han sido denominados también cualquier paciente puede beneficiarse de su
profilácticos, preventivos o de mantenimien- uso permanente; no es posible predecir quie-
to. El mejor ejemplo de ellos son las drogas nes van a responder, y un esquema de trata-
antiinflamatorias o esteroides inhalados, que miento durante 6-8 semanas es la única ma-
pueden interrumpir el desarrollo de la inflama- nera de poder establecer su utilidad.
ción de la vía aérea y además tienen un efec-
to profiláctico. Interfieren con el metabolismo El nedocromil sodio es 4-10 veces más po-
del ácido araquidónico, la síntesis de leuco- tente que el cromoglicato y actúa también inhi-
trienos y prostaglandinas, reducen la exuda- biendo la acción de sustancias pro-inflamato-
ción en la microvasculatura, inhiben la produc- rias en la vía aérea y evitando la liberación de
ción y secreción de citoquinas, previenen la otras preformadas en diferentes células (mas-
activación y migración de las células inflama- tocitos, linfocitos T, eosinófilos) responsables
torias y mejoran la respuesta de los recepto- de iniciar y mantener activo el proceso inflama-
res B del músculo liso, restableciendo el efecto torio; puede usarse en forma continua y los
broncodilatador. estudios clínicos demuestran una respuesta
rápida con mejoría de síntomas y de función
Múltiples estudios demuestran su eficacia me- pulmonar; su utilidad en niños no está aún de-
jorando la función respiratoria, reduciendo la terminada. Tanto el cromoglicato como el ne-
hiper-reactividad bronquial, disminuyendo sín- docromil están casi completamente exentos
tomas, reduciendo la frecuencia de episodios de efectos colaterales.
agudos y mejorando enormemente la calidad
de vida. Usos prolongados de altas dosis son La teofilina de acción prolongada, usada du-
útiles en el tratamiento del asma severa per- rante años como droga broncodilatadora de po-
sistente, porque reducen la necesidad de uti- tencia moderada (aliviadora), ahora se acepta
lizar esteroides orales por largo tiempo y tie- que posee un efecto antiinflamatorio (con-
nen mucha menor incidencia de efectos cola- trolador) útil tanto en la reacción temprana
terales. como en la reacción tardía del asma y en la
reducción de síntomas y mejoría de la función
Los medicamentos antialérgicos (anti-hista- respiratoria. Dentro del esquema de manejo se
mínicos) pueden también tener efecto contro- acepta su gran utilidad para el control de los
lador, pero no existen estudios que demues- síntomas nocturnos, por lo cual se recomien-
tren un control satisfactorio a largo plazo y su da observar cuidadosamente su dosificación
efecto es mucho menor que el de los esteroi- para evitar efectos adversos significativos.
des y otras drogas antiinflamatorias. La efica-
cia del ketotifeno no está suficientemente es- Los B2-agonistas de larga duración (formo-
tablecida y su efecto sobre los cambios infla- terol-salmeterol) son medicamentos bronco-
matorios crónicos de las vías aéreas no está dilatadores útiles en el control de la reacción
comprobado completamente. Su eficacia pa- temprana y tardía en el asma. Su posición en
rece observarse después de varias semanas los esquemas de tratamiento no está clara-
de tratamiento y beneficia especialmente a mente definida aún, pero su utilización rutina-
niños y jóvenes. ria disminuye los síntomas nocturnos, mejora
la función pulmonar y reduce la necesidad de

549
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

la utilización de B2-agonistas de corta acción. Medicamentos aliviadores: actúan inmedia-


No están indicados durante el manejo de la tamente y se prescriben para mejorar la dis-
crisis asmática aguda. nea, produciendo bronco-dilatación temporal
inmediata; son especialmente usados para la
mejoría rápida de la asfixia, aceptándose que
CONTROLADORAS:
su uso debe ser según la necesidad, deján-
• corticosteroides inhalados.
dolos a discreción del paciente.
• corticosteroides sistemicos.
• cromoglicato de sodio.
Los B2 agonistas (simpático-miméticos) son
• nedocromil sodio.
broncodilatadores y actúan relajando el mús-
• antileucotrienos.
culo liso de la vía aérea; mejoran también la
• teofilinas de larga acción.
acción muco-ciliar, disminuyen la permeabili-
• B2 agonistas de larga acción
dad en la microvasculatura y hay estudios que
inhalados.
sugieren que pueden tener efecto estabiliza-
• B2 agonistas de larga acción orales.
dor en mastocitos y basófilos. Su eficacia es
• ketotifeno??.
mayor por vía inhalatoria que cuando se utili-
zan en forma oral o parenteral, presentándo-
Antileucotrienos: los leucotrienos, metabo- se también mínimos efectos colaterales inde-
litos derivados del ácido araquidónico, son seables como temblor, taquicardia, etc. Son
substancias pro-inflamatorias que al ser inha- el mejor ejemplo de medicamentos aliviadores
ladas en forma experimental producen espas- y están indicados en el manejo de la crisis
mos bronquiales severos similares a un epi- asmática aguda; deben utilizarse previamen-
sodio asmático agudo. Pacientes tratados con te al ejercicio y se consideran como la droga
medicamentos anti-leucotrienos que presen- de elección en el manejo del asma episódica.
tan asma leve y asma moderada han demos- A pesar de que su uso permanente durante
trado en forma consistente mejorías en las largos periodos es muy generalizado, hay es-
cifras espirometricas VEF1 y Flujo pico (PEFR) tudios que sugieren que el empleo permanen-
entre un 15-25% y un 50%, disminuyendo los te por horario en forma prolongada puede aca-
episodios de asma nocturna, pues reducen la rrear un pobre control funcional del asma; por
intensidad de los síntomas, disminuyen el uso lo tanto, deben asociarse al uso de medica-
de los B-agonistas inhalados y también la fre- mentos antiinflamatorios, éstos sí en forma
cuencia y severidad de los ataques asmáticos. continua (esteroides inhalados) y dejar el uso
Estos medicamentos proveen efecto adicio- de B2 agonistas según la necesidad, suspen-
nal a los de los otros medicamentos anti- diéndolos cuando se observe un control fun-
asmáticos y permiten la reducción de la dosis cional satisfactorio.
de esteroides inhalados.
Los esteroides sistémicos (orales o parente-
No existe aún una indicación acerca de cuá- rales), a pesar de que el inicio de su acción
les pacientes asmáticos van a beneficiarse puede tardar 4-6 horas, son indispensables
con el uso de los medicamentos anti-leucotrie- en el manejo de las crisis agudas de asma
nos, y por tanto debe utilizarse este tipo de debido a que evitan la progresión de los sínto-
medicamentos para poder determinar el be- mas, reducen la necesidad de acudir a los ser-
neficio. Sus mínimos efectos colaterales per- vicios de urgencias y disminuyen el porcenta-
miten iniciar pronto su uso en la mayoría de je de hospitalizaciones. Una vez se haya con-
los pacientes. trolado el episodio agudo deberá instaurarse

550
CAPÍTULO XXI: ASMA BRONQUIAL

un esquema oral de esteroides durante 10-20 gangliónica eferente, reduciendo el tono de la


días, utilizando el equivalente a 16-32 mg/día vía aérea; son menos potentes que los B2-
de metilprednisolona para reducirlos en forma agonistas y su efecto también es más lento,
gradual hasta suspenderlos. Algunos pacien- demorándose 30-60 minutos para obtener su
tes requerirán uso prolongado de dosis meno- efecto máximo. Hay reportes que demuestran
res, que idealmente deben ser tomadas en un efecto broncodilatador aditivo al B2 inhala-
forma ínterdiaria y a la menor dosis efectiva do durante la fase aguda del asma, pero no
útil. hay evidencia clara del beneficio a largo pla-
zo. Se acepta que podrían ser una alternativa
Es indispensable conocer y familiarizarse con útil en los casos en los que hay presencia de
los efectos colaterales de estos medicamentos muchos efectos colaterales por la utilización
para identificarlos, controlarlos y advertir a los de B2-agonistas. El único efecto colateral mo-
pacientes de su presencia; los más importan- lesto es la sequedad de las mucosas orales.
tes son: aumento del apetito, retención de so-
dio con edemas y aumento de peso, alteracio- La teofilina y los B2-agonistas orales o paren-
nes en el metabolismo de la glucosa, altera- terales de acción corta poseen muchos efec-
ciones emocionales, gastritis y úlcera péptica, tos colaterales indeseados, especialmente
osteoporosis, etc. Estas alteraciones serán cardiovasculares y temblor muscular, lo cual
menos frecuentes si la dosis es menor y el los ha relegado del manejo rutinario del asma.
tiempo de utilización más corto.

TRATAMIENTO ESCALONADO
ALIVIADORAS: “DE ACCIÓN INMEDIA-
TA”, “DE RESCATE” Para cada nivel de severidad de asma se ha
• B2 AGONISTAS INHALADOS DE definido un manejo correspondiente, siendo
ACCIÓN INMEDIATA más complejo en la medida que el grado de
• CORTICOIDES SISTÉMICOS severidad aumente. El clínico debe incremen-
• ANTICOLINEGICOS INHALADOS tar o reducir la intensidad del manejo de acuer-
(bromuro de ipratropium) do al nivel de severidad en que el paciente se
• TEOFILINA DE ACCIÓN CORTA encuentre. Es un proceso dinámico durante
• B2 ORALES DE ACCIÓN CORTA toda la vida del individuo asmático.

El siguiente es el manejo indicado para cada


Los anticolinérgicos inhalados (bromuro de uno de los diferentes grados de severidad del
ipratropium y bromuro de oxitropium) son bron- asma según la “ Global Initiative for Asthma”
codilatadores que bloquean la vía vagal post- (–GINA- Jan 2002):

551
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Asma leve intermitente

Controladora Aliviadora
• Ninguna (?) B2 agonistas inhalados
(“a necesidad” “variable”- < de una vez / semana )
• Pre-ejercicio B2 inhalados
cromolin o nedocromil

Asma leve persistente


Controladora Aliviadora
• Esteroides inhalados
(200-400-800 mcg/dia) B2 inhalado (3-4 veces/dia)
a necesidad (prn)
• Cromoglicato de sodio o nedocromil
• Antileucotrienos
• Para síntomas nocturnos: teofilina acción prolongada
(B2 orales o inh. de acción prolongada)

Asma moderada persistente


Controladora Aliviadora
Corticoides inhalados
(800-2.000 mcg/día) B2-agonista Inhalado de larga duración (c/12hs)
-Formoterol – Salmeterol -
Antileucotrienos B2 Agonista de corta duración a necesidad (prn)
Sintomas nocturnos (3-4 veces/dia)
Teofilina Acción prolongada (B2 inh./orales acción prolongada)

Asma severa persistente


Controladoras Aliviadoras
Corticoides Inhalados ( > 1mg/dia) B2 Agonista inhalado de Larga
Duración (formoterol - salmeterol)
Broncodilatadores de acción prolongada B2 Agonista de corta duración (prn “a necesidad”)
(teofilina - B2 oral/inh.)
Esteroides orales (*) (*) Días alternos, la menor dosis efectiva.

ASMA BRONQUIAL AGUDA súbitamente o desarrollarse en forma progre-


(CRISIS ASMÁTICA AGUDA) siva, y son de duración variable de horas o
días. A pesar de que la mayoría de los pa-
Todos los pacientes asmáticos tienen el ries- cientes han tenido tiempo suficiente para in-
go de desarrollar ataques agudos de asma crementar en una forma adecuada sus medi-
que los llevan al borde de la falla respiratoria camentos, por lo general sólamente aumen-
aguda. Estos ataques agudos pueden ocurrir tan el consumo de B2 inhalados pero no ini-

552
CAPÍTULO XXI: ASMA BRONQUIAL

cian o aumentan los corticosteroides, medi- Gases arteriales


camentos esenciales en el manejo de esta
situación. Esta determinación es muy útil durante el ma-
nejo del síndrome, cuando el VEF1 es <1L o el
Factores que predicen la presencia de asma fatal o severa
Flujo Pico <120 L/min; la medición de gases
- intubación previa por asma - hipercapnia arteriales es indispensable para definir el gra-
- neumomediastino - neumotórax do de hipoxemia y de acidemia presentes. En
- hospitalizaciones previas - uso crónico de esteroides las fases iniciales del status asmaticus general-
- enfermedad psiquiátrica asociada mente se encuentra hipoxemia moderada y
- utilización inadecuada de los medicamentos alcalosis respiratoria (hipocapnia), que si per-
siste por horas o días se asocia con reducción
Examen físico y signos vitales: generalmen- en las cifras de bicarbonato (acidosis metabó-
te el paciente se encuentra sentado y sin po- lica). En la medida que la dificultad respiratoria
sibilidad de asumir la posición de decúbito, progresa, se encuentra, cuando el paciente
sudoroso (la confusión mental es un signo de está cansado, hipercapnia, la cual generalmen-
paro respiratorio inminente), generalmente de- te se presenta cuando el VEF1 es <25%. La
muestran cansancio físico y solicitan ayuda hipercapnia por sí sola no es indicación de intu-
médica y paramédica en forma permanente. bación, pero es uno de los hechos que la predi-
Exhiben taquicardia (>120/min), taquipnea cen; no todos los pacientes que finalmente re-
(>30 resp/ min), pulso paradójico(>15 mmHg). quieren intubación la presentan. Un tratamien-
to agresivo con medicamentos la controla y la
Las sibilancias son un mal indicador de la se- evolución clínica puede ser igual que la de otros
veridad del asma, puesto que en el estado as- pacientes que no la presentaban inicialmente.
mático agudo generalmente puede haber mar-
cada disminución de ellas o “silencio torácico Radiografía del tórax
“ por el escaso flujo aéreo presente. En estos
pacientes el desarrollo posterior de sibilancias Su importancia es menor en el manejo de este
indica mejoría del grado de obstrucción. síndrome, y está indicada solamente en aque-
llos casos en que se sospeche la presencia
Medición del grado de obstrucción (medi- de barotrauma (dolor torácico, frotes pleurales,
ción de flujo pico o espirometría). La pre- enfisema subcutáneo, inestabilidad cardiovas-
sencia del síndrome agudo de asma (“status cular, ruidos respiratorios asimétricos) o ante
asmaticus”) siempre está acompañado de dis- la sospecha de infección, o sea de neumonía
minución de más del 50% de las cifras de VEF1 asociada (fiebre, estertores alveolares, conso-
ó Flujo Pico. La medición rutinaria es impor- lidación, hipoxemia refractaria a la oxigenote-
tante, pero no debe retrasar el inicio del trata- rapia). Puede también ser útil cuando no es
miento. No es fácil para un paciente en estado claro desde el punto de vista clínico que el
asmático agudo hacer las maniobras de medi- asma sea la causa de una falla respiratoria
ción y puede haber errores técnicos en su rea- aguda.
lización. Una maniobra forzada de espiración
puede precipitar crisis de tos y asfixia que no
son deseables en estos momentos. TRATAMIENTO
Los fines del tratamiento del ataque agudo de
asma bronquial son:

553
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

1. Revertir la obstrucción de la vía aérea lo descartando esta vía en pacientes que van a
antes posible. requerir intubación o que presentan vómito.
2. Controlar rápida y adecuadamente la hipo-
xemia. Los esteroides sistémicos requieren al menos
3. Recuperar la función respiratoria pronta- cuatro horas para demostrar su acción antiinfla-
mente. matoria y producir mejoría clínica. Metaanálisis
4. Planes para evitar episodios futuros. recientes sugieren que dosis de glucocorticoi-
5. Dar instrucciones escritas de manejo de des equivalentes a 60-80 mg/día de metilpred-
crisis actuales y futuras. nisolona o 300-400 mg de hidrocortisona son
probablemente adecuados (evidencia grado B).
Oxígeno: desde el momento de la admisión La duración del tratamiento no está completa-
el paciente debe recibir oxígeno por cánula mente establecida, pero 10-14 días en adultos
nasal a 3,0 L/min (FiO2 30%) en forma rutina- y 3-5 días en niños pueden considerarse apro-
ria. Si la pulso-oximetría permanece por deba- piadas (evidencia grado D). Aparentemente no
jo de 90% con esta concentración de oxígeno, hay necesidad de hacer una reducción gradual
debe hacerse la determinación de gases arte- si se usan durante un periodo corto o varias
riales para confirmar la existencia de hipoxe- semanas (evidencia grado B).
mia y entonces iniciar la administración de ma-
yores concentraciones de oxígeno por medio Los glucocorticoides inhalados pueden ser úti-
de máscaras (FiO2 50%). La presencia de hi- les en el manejo de las exacerbaciones agu-
poxemia refractaria al manejo con cánulas na- das: hay estudios que demuestran que altas
sales debe hacer sospechar otras patologías dosis de esteroides inhalados y B2 de corta
asociadas como neumonía, barotrauma, etc. acción también inhalados, produce mejor gra-
do de dilatación que la utilización de broncodi-
Corticosteroides: los esteroides reducen la latadores exclusivamente (evidencia grado B).
inflamación de la vía aérea. Su utilización re-
duce las muertes por estado asmático agudo, Pacientes egresados de urgencias recibien-
disminuye el número de hospitalizaciones y do esteroides inhalados y orales evolucionan
también reduce los episodios de relapso en mejor y tienen menos probabilidades de recaí-
las horas o días siguientes. Su uso debe ser da que aquellos con esteroides orales sola-
rutinario en estos casos, y están indicados pa- mente (evidencia grado B). Altas dosis de este-
ra el manejo de cualquier exacerbación, ex- roides inhalados logran una eficiencia similar
cluyendo únicamente las muy leves (eviden- para prevenir exacerbaciones que dosis ora-
cia grado A) Su utilización está claramente les de esteroides (evidencia grado A). Pacien-
indicada en las tres siguientes circunstancias: tes que no toleran o no aceptan recibir esteroi-
des sistémicos pueden ser manejados con
1. Ausencia de mejoría con la utilización del altas dosis de esteroides inhalados, observán-
esquema de B2 agonistas. dose un costo mayor que en ciertos casos
2. En pacientes que ya están recibiendo puede estar justificado.
esteroides sistémicos.
3. Historia de exacerbaciones agudas que Beta-agonistas: constituyen la droga de elec-
requirieron esteroides sistémicos. ción para manejar el espasmo del músculo liso
de vía aérea en el status asmaticus. Terbuta-
Pueden ser usados por vía parenteral (intra- lina y salbutamol son los más utilizados por
muscular o intravenosa) o inclusive por vía oral, tener un efecto B2 más selectivo y un inicio

554
CAPÍTULO XXI: ASMA BRONQUIAL

inmediato de acción. Se recomienda nebuli- cientes que puedan requerir intubación; la


zación cada 20 minutos durante la primera medición de niveles debe iniciarse 4-6 horas
hora y continuar cada hora hasta detectar me- después de iniciada esta medicación. La ad-
joría clínica y funcional. Hay datos que sopor- ministración oral previa hace indispensable la
tan el hecho de que estos medicamentos tam- medición de niveles sanguíneos de la droga
bién pueden administrarse por medio de inha- antes de re-iniciar su administración.
ladores de mano con espaciadores logrando
un beneficio funcional similar. Teofilina (aminofilina): dosis inicial 6 mg/kg
en infusión en 30 minutos seguida, de 0,5 mg/
Terbutalina. Nebulizacion: 5-10 gotas (4-10 kg/hora en infusión continua.
mg) en 2,5 mL de sol. salina.
Inhalación con espaciador: 2-4 aspiraciones. Anticolinérgicos (bromuro de ipratropio): su
Cada 20 minutos en la primera hora, después utilización no se debe hacer en forma rutinaria;
cada hora. su utilidad como droga de segunda línea es
reconocida por haberse encontrado que pue-
Salbutamol. Nebulizacion: 0,5 mL de solución de aumentar la mejoría de las cifras de VEF1
al 0,5% (2,5 mg) en 2,5 de sol salina. al usarlo en forma simultánea con los B2
Inhalación con espaciador: 2-4 aspiraciones. inhalados. Se recomienda su administración en
Cada 20 minutos en la primera hora, después pacientes que no responden adecuadamente
cada hora. a los B2 inhalados y los corticosteroides.

Teofilina: Es un broncodilatador menos efi- Antibióticos: debido a que las infecciones que
caz que los B2 inhalados; por lo tanto, no es generalmente desencadenan el asma son
la droga de primera elección. Su utilización virales, no hay indicación para la prescripción
simultánea puede aumentar la incidencia de de antibióticos. La aparente purulencia del es-
efectos colaterales como náusea, temblor, ta- puto no es razón para su administración debi-
quicardia y ansiedad. No hay estudios que res- do a que ésta es consecuencia de la presencia
palden su utilización en estado asmático agu- de células inflamatorias, especialmente eosi-
do o que demuestren una mejoría más rápida nófilos. La presencia de fiebre junto con un
con su administración. Su uso está restringido examen de esputo con abundancia de neutró-
solamente para aquellos pacientes con res- filos, el hallazgo de una consolidación neumó-
puesta inadecuada después de la administra- nica o la presencia de sinusitis purulenta agu-
ción de B2 inhalados y corticoesteroides. No da son indicaciones de antibioterapia. La sos-
hay diferencia en la utilización oral o perente- pecha clínica de una infección por gérmenes
ral, prefiriendo la infusión intravenosa en pa- atípicos también es indicación.

555
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FLUJOGRAMA PARA EL MANEJO DE LOS PACIENTES ASMÁTICOS


EN EL DEPARTAMENTO DE URGENCIAS

Evaluación inicial:Diagnóstico clínico de asma bronquial


Determinar grado de obstrucción (Flujo Pico o VEF1)
Oximetría transcutánea
Tratamiento inicial:
Oxígeno (C. nasal 3,0 L/min ) buscar saturometria >90% en adultos y de 95% en niños.
B2 inhalado: nebulizacion cada 20 min durante una hora.
Esteroides sistémicos.
Sedación contraindicada.

Re-evaluacion clínica y funcional periódicas (FEP o VEF1 & Oximetria) :


Episodio moderado (FEP o VEF1= 60-80%)
Episodio severo (FEP o VEF1= <60%)

RESP. COMPLETA RESP. INCOMPLETA RESP. POBRE


FEP o VEF1 >70% FEP o VEF1 <70% FEP o VEF1 = <50%
SatO2 >90% SatO2 <90% SatO2 <70%
Hipercapnia
Salida Esteroides sistémicos Esteroides sistémicos
Consid. esteroides Agregar Ipratropium Agregar Ipratropium
Seguim. Cons. Ext. Continuar Observación Considerar teofilina
Considerar Teofilina IV Consid. B2 sistémicos
Magnesio
Consid. hospitalización (**) Consid. UCI
intubación

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Aparna Kumar, William W. Busse. Clinical aspects 4. Jantz MA, Sahn S. State of the art: corticosteroids
of anti-inflammatory therapy in asthma. Curr Opin in acute respiratory failure. Am J Resp Crit Care
Pulm Med 1996; 2:40-247. Med 1999; 160:1079-1100.
1. Caraballo D, García E, Cabalero A, et al. Preva- 5. Rowe BH, Keller JL, Oxman AD: Effectiveness of
lencia de asma y otras enfermedades alérgicas steroid therapy in acute exacerbations of asthma:
en Colombia. Rev Col Neumol 1999; 11:13-23. a meta-analysis. Am J Emerg Med 1992; 10:301–
2. Global strategy for Asthma Management and 310. www.ginasthma.com
Prevention. National Instiutes of Health. Revised 6. Zuege DJ, Whitelaw WA. Management of acute
2002. NIH publication No. 02-3659 (GINA). respiratory failure in chronic obstructive pulmonary
3. Iteriano B. Kalpalatha G. Clinical aspects of disease. Curr Opin Pulm Med 1997; 3:190-197.
asthma. Curr Opin Pulm Med 1996; 2; 60-65.

556
CAPÍTULO XXII: DERRAME PLEURAL

CAPÍTULO XXII

Derrame pleural

Fidel Camacho Durán, MD, FACS


Profesor de Cirugía y Director del Programa de Postgrado de Cirugía de Tórax,
Universidad El Bosque
Jefe de la Sección de Cirugía de Tórax
Fundación Santa Fe de Bogotá

Carlos Ernesto Garavito, MD


“Fellow” del Postgrado de Cirugía de Tórax
Universidad El Bosque
Hospital Santa Clara

DEFINICIÓN

E l derrame pleural se define como la acu-


mulación anormal de líquido en el espa-
cio pleural.
la pleura visceral tiene dos funciones impor-
tantes: contribuir al retroceso elástico y limi-
tar el volumen pulmonar de insuflación.

No se trata de una entidad patológica sino del En condiciones normales las dos capas pleu-
resultado de un desequilibrio entre la forma- rales se encuentran en aposición, lubricadas
ción del líquido pleural y su reabsorción. La por un líquido seroso secretado por las células
mayoría de las veces es secundario a enfer- mesoteliales que evita la fricción con los movi-
medad pleural o pulmonar, pero puede ser mientos respiratorios. La producción diaria
causado por enfermedades extrapulmonares normal de líquido pleural es de 0,1 a 0,2 mL/
(cardiacas, hepáticas, renales, pancreáticas), kg de peso corporal; permanecen menos de
sistémicas (LES, artritis reumatoidea) y neo- 15 mL en el espacio pleural. La contribución
plásicas (primarias, metastásicas). de la pleura visceral a la formación de líquido
es mínima.

FISIOPATOLOGÍA El drenaje o reabsorción de este líquido se


hace por estomas, que son orificios que pue-
La superficie interna de cada hemitórax está den ser vistos en microscopia electrónica en
recubierta por la pleura parietal, formada por la pleura parietal y que están comunicados con
una capa de células mesoteliales y tejido co- lagunas linfáticas que drenan a los ganglios
nectivo (con microvasculatura y lagunas linfá- linfáticos torácicos.
ticas) que se invagina en cada hilio pulmonar
formando la pleura visceral que recubre toda El movimiento de líquido entre las hojas parie-
la superficie pulmonar. El tejido conectivo en tal y visceral está determinado por la ecuación

557
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de Starling del transporte de líquidos, según DIAGNÓSTICO


la cual la entrada y salida de líquido y proteínas
a partir de los capilares ocurre en forma ba- Historia clínica: el motivo de consulta, por lo
lanceada, manteniendo un volumen y una general, son los síntomas propios de la enfer-
concentración constantes. medad subyacente. Para la presentación de
disnea, que es el síntoma más relacionado con
La presión hidrostática de la pleura parietal derrame pleural, se requieren volúmenes
es de aproximadamente 30 cm de agua, que grandes en pacientes con pulmones sanos, a
sumada a la presión negativa intrapleural de diferencia de los pacientes con enfermedad
5 cm de agua da un efecto neto de 35 cm de pulmonar previa, en los cuales con pequeños
agua. La presión coloidosmótica del plasma volúmenes de derrame aparecen síntomas.
es de 34 cm, menos la presión coloidosmótica
del espacio pleural de 8 cm, da un efecto neto Ocasionalmente se presenta dolor pleurítico
de 26 cm de agua. Es decir, que la presión de debido a inflamación de la pleura parietal.
filtración es de 9 cm de agua (35 menos 26)
de la pleura parietal hacia la cavidad pleural, Examen físico. Sin mencionar los hallazgos
lo cual favorece la formación de líquido pleural. propios de las diferentes enfermedades cau-
En la pleura visceral operan los mismos facto- santes de derrame pleural, puede encontrarse
res, pero con una presión hidrostática que pro- taquipnea, respiración superficial y los signos
viene de la circulación pulmonar, la cual es patognomónicos de derrame pleural: disminu-
menor. Así, la presión que favorece la absor- ción de la expansión torácica, frémito vocal,
ción de líquido en la pleura visceral es de 10 matidez percutoria, disminución del murmullo
cm de agua. El movimiento de líquido por el vesicular e hipoventilación.
espacio pleural varía entre 5 y 10 litros/día.

Existen seis mecanismos por los cuales se AYUDAS DIAGNÓSTICAS


forman los derrames pleurales, sin distinción
de su etiología: Imagenología: en la radiografía de tórax
posteroanterior (PA) y lateral, tomada con el
1. Incremento de la presión hidrostática capi- paciente de pie, el hallazgo típico en el derra-
lar, como sucede, por ejemplo, en la insu- me pleural es el borramiento del ángulo costo-
ficiencia cardiaca congestiva. frénico por una opacidad homogénea, cónca-
2. Disminución en la presión oncótica capilar, va hacia arriba, que indica una cantidad de
como sucede en la hipoalbuminemia severa. liquido aproximada de 250 mL.
3. Aumento de la permeabilidad capilar, como
sucede en procesos inflamatorios o neo- Cuando el derrame es mayor, se presenta una
plásicos. opacidad homogénea, sin broncograma
4. Disminución del drenaje linfático: obstruc- aéreo, con borde de concavidad superior y lo-
ción por tumor, fibrosis, radiación, etc. calizado en la parte inferior del tórax. Entre
5. Disminución de la presión del espacio pleu- más grande sea, más espacio ocupa en el he-
ral, como sucede en colapso o atelectasia mitórax, hasta llenarlo todo en el caso de de-
pulmonar. rrames masivos. El derrame subpulmonar se
6. Paso del líquido peritoneal a través de los caracteriza por una imagen de elevación del
linfáticos diafragmáticos o por defectos hemidiafragma del mismo lado, desplazamien-
anatómicos en el diafragma. to lateral de la cúpula diafragmática y aumento

558
CAPÍTULO XXII: DERRAME PLEURAL

de la distancia entre el diafragma y la burbuja CLASIFICACIÓN


gástrica (>2 cm). La presencia de nivel hidro-
aéreo significa la presencia simultánea de aire Los derrames pleurales se dividen en trasuda-
en la cavidad pleural. dos y exudados.

La proyección en decúbito lateral es de gran Los trasudados son filtrados del plasma que
ayuda, especialmente en derrames pequeños, resultan del aumento de la presión hidrostá-
debido a que el líquido se desplaza hacia el tica, disminución de la presión oncótica y, en
lado y forma una franja lateral contra la pleura ocasiones, alteración de la permeabilidad ca-
parietal, que permite su visualización. Además pilar. Las causas más frecuentes, en su orden,
de hacer el diagnóstico, permite decidir si da- son:
ría rendimiento la toracentesis cuando esta
franja es mayor de 1 cm. En derrames masivos • insuficiencia cardiaca congestiva;
no hay cambios comparativos con la placa • síndrome nefrótico;
posteroanterior, y se evidencia desviación con- • cirrosis;
tralateral del mediastino. La radiografía en de- • sobrecarga de líquidos.
cúbito lateral también es de gran ayuda para
determinar tabicamiento, puesto que el derra- El exudado es un líquido rico en proteínas,
me no cambia con la posición del paciente. resultado de la inflamación de la pleura; se
produce por alteraciones de la permeabilidad
Cuando se observan niveles hidroaéreos, hay capilar. Otra causa es la obstrucción del dre-
que definir de donde proviene el aire (esófago, naje linfático. Las causas más frecuentes de
árbol traqueobronquial, pared torácica, ante- exudados son:
cedentes de punciones).
• infecciones;
La radiografía de tórax en muchos casos su- • enfermedad maligna;
giere la etiología del derrame. • enfermedades del colágeno.

Otros exámenes diagnósticos son el ultraso- Existen varios criterios para la diferenciación
nido, para determinar tabiques, características entre trasudados y exudados. Los más utili-
del líquido, marcar sitio de punción, y la tomo- zados son los criterios de Light (con uno solo
grafía axial computadorizada (TAC), que puede se hace el diagnóstico):
mostrar patología del parénquima pulmonar:
infiltrados, nódulos, masas o atelectasias. 1. Relación proteínas líquido pleural/sérica
>0,5.
Toracentesis y análisis del líquido pleural: 2. Relación de deshidrogrenasa láctica (LDH)
es el procedimiento ideal para llegar a un diag- pleural/sérica >0,6.
nóstico y definir el manejo más adecuado del 3. LDH pleural >2/3 límite superior de LDH
derrame pleural. Es recomendable en toda normal en suero.
efusión pleural nueva o siempre que se tenga
duda en cuanto a la etiología. El lugar más Otros criterios útiles para el diagnóstico de
recomendado para hacer la toracentesis es exudado son:
la espalda, inmediatamente por debajo del
ángulo inferior de la escápula, el cual corres- • concentración de glucosa en líquido pleural
ponde al séptimo espacio intercostal. <60 mg/dl, sugestivo de empiema;

559
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• neoplasia; dado o de un exudado, porque el manejo es


• tuberculosis (TBC); muy diferente.
• lupus eritematoso sistémico (LES).
Trasudados: el diagnóstico etiológico suele ser
Un valor de pH en el líquido pleural <7,3, se fácil por la sintomatología y el examen físico
encuentra en las mismas condiciones patoló- del paciente. La toracentesis debe ser utilizada
gicas que cursan con glucosa baja y en la rup- como prueba diagnóstica en los casos de rápi-
tura esofágica. Se asocia, además, con una da acumulación. La única indicación de reali-
menor tasa de supervivencia en el caso de zar toracentesis terapéutica es sintomatología
patología maligna y menor respuesta a la de disnea severa secundaria a derrame masi-
pleurodesis química. vo. Nunca se deben drenar más de 1.200 mL
en un solo procedimiento por el riesgo de ede-
En cuanto al recuento y la diferenciación ce- ma pulmonar de reexpansión o hipotensión.
lulares, recuentos de leucocitos >10.000/mL
se ven en exudados y >50.000/mL en el El tratamiento óptimo de los trasudados resi-
empiema. La linfocitosis es indicativa de TBC, de en el manejo adecuado de la patología de
enfermedad maligna, sarcoidosis y colage- base.
nosis. La neutrofilia predomina en neumonía,
embolia y pancreatitis. Exudados: el tratamiento depende de la cau-
sa. En el caso de derrame paraneumónico,
La medición de triglicéridos es de utilidad que es la causa más frecuente de exudado,
siempre que se sospeche o se quiera descar- existe una clasificación propuesta por Light
tar quilotórax, entidad en la cual se encuen- que permite hablar el mismo lenguaje y deci-
tran valores >110 mg/dL. dir el manejo:

Cuando el valor de adenosina deaminasa Tipo I: No significante.


(ADA) sea >45 UI, el diagnóstico se inclina <1 cm de ancho en la radiografía la-
hacia TBC. teral de tórax.
Manejo: Observación y control clíni-
Son criterios diagnósticos de por si solos, la co y radiológico.
presencia de material purulento o cultivo po- Tipo II: Derrame paraneumónico típico.
sitivo para determinar empiema, y la citología Glucosa >40 mg/dL, pH >7,2 , LDH
positiva para determinar malignidad. <3x el valor normal.
Manejo: antibióticos y toracentesis
Recuentos de eritrocitos >100.000 indican repetidas.
cáncer, tromboembolismo pulmonar o trauma. Tipo III: Derrame pleural complicado límite
En presencia de valores elevados de amilasa Glucosa > 40mg/dL, pH 7-7,2 , LDH
se debe sospechar pancreatitis o perforación >3x el valor normal.
esofágica. Manejo: antibióticos y toracostomía
cerrada vs. toracentesis repetidas.
Tipo IV: Derrame complicado simple.
TRATAMIENTO Glucosa <40 mg/dL, pH <7, Gram o
cultivo positivos.
Lo más importante es determinar, mediante Manejo: antibioticoterapia y toracos-
los criterios anteriores, si se trata de un trasu- tomía cerrada.

560
CAPÍTULO XXII: DERRAME PLEURAL

Tipo V: Derrame complicado. MANEJO DEL DERRAME


Igual que el anterior, pero multilo- PLEURAL MALIGNO
culado.
Manejo: antibioticoterapia y toracos- Los derrames pleurales malignos por lo gene-
copia de limpieza (fibrinolíticos?). ral son exudados sanguinolentos de predo-
Tipo VI: Empiema simple. minio linfocítico, con glucosa <60 mg/dL y antí-
Material purulento. geno carcinoembrionario (ACE) > 5 ng/mL.
Toracoscopia cerrada y antibiotico-
terapia. Según evolución, cirugía. El rendimiento diagnóstico de la citología es
Tipo VII: Empiema complicado. de 60% para malignidad. La sensibilidad de
Igual que el anterior, pero multilo- la citología en combinación con biopsia percu-
culado. tánea con aguja puede llegar a 80%, mientras
Antibioticoterapia y toracotomia o que la de la biopsia pleural guiada por tora-
toracoscopia de limpieza. coscopia está por encima de 95%.

El tratamiento del empiema debe cumplir tres El tratamiento del derrame pleural maligno es
requisitos: antibióticos, drenaje y obliteración paliativo y se basa en la pleurodesis. Sin pleu-
del espacio pleural (expansión pulmonar). rodesis posterior al drenaje terapéutico del
derrame, se produce rápida acumulación en
En el caso de TBC pleural, el tratamiento es el mismo sitio. Para que la pleurodesis sea
el mismo que para otras formas de TBC (tetra- efectiva, el pulmón debe estar expandido.
conjugados).
Los agentes utilizados para la pleurodesis se
La actinomicosis y la nocardiosis pulmonar son dividen en esclerosantes (tetraciclina, bleomy-
tratadas por periodos prolongados con el an- cina, talco) y citostáticos (cisplatino). Estos
tibiótico específico y con drenaje con tubo de últimos son menos utilizados por sus resulta-
tórax. La aspergilosis pulmonar debe mane- dos inferiores.
jarse con resección de la pleura comprometi-
da y anfotericina B. Existe también la pleurodesis mecánica
(abrasión directa).
La pleuritis secundaria a infección viral resuel-
ve espontáneamente en un par de semanas. El agente más utilizado por sus mejores re-
sultados y mayor disponibilidad es el talco, en
La pleuritis reumatoidea se maneja con anti- una dosis entre 5 y 10 gramos. La pleurodesis
inflamatorios no esteroideos y en ocasiones se puede realizar por insuflación (toracosco-
con corticoides orales. La pleuresía lúpica tie- pia, toracotomía) o por instilación de 5 g de
ne una mejor respuesta al manejo con corti- talco disueltos en 100 mL de solución salina a
coides. través del tubo de toracostomía.

El derrame por embolia pulmonar, aunque sea


hemorrágico, no contraindica la anticoagula-
ción.

561
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Bejarano M. Derrames pleurales en urgencias. 6. Colice GL, Curtis A, Deslauriers J. Medical and
Rev Colomb Cir 1999; 14: 263-273. surgical treatment of parapneumonic effusions: an
2. Bouros D, Schiza S. Intrapleural urokinase ver- evidence based guideline. Chest 2000; 118:1158-
sus normal saline in the treatment of complicated 1171.
parapneumonic effusions and empyema. Am J 7. Collins TR, Sahn SA. Thoracentesis:
Respir Care Med 1999; 159:37-42. complications, patient experience and diagnostic
3. Broaddus VC, Light RW, What is the origin of value. Chest 1987; 9:22-29.
pleural transudates and exudates? Chest 1992; 8. Light RW, Pleural diseases. 4th ed. Lippincott
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4. Camacho Duran F, Restrepo Molina J. Enferme- 9. Light RW, Pleural effusion. N Engl J Med 2002;
dades de la pleura. En: Fundamentos de Medici- 346:1971-1977.
na. Neumología. Tercera edición. Corporación 10. Prieto DE, Posada A. Enfermedades de la pleura.
para Investigaciones Biológicas. Medellín, 1986. En: Fundamentos de Medicina. Neumología. Quin-
5. Canto A, Ferrer G, Moya J, Lung cancer and ta edición. Corporación para Investigaciones Bio-
pleural effusion: clinical significance and study of lógicas. Medellín, 2001.
pleural metastasic locations. Chest 1985; 87:649- 11. Sahn D. The Pleura. State of the art. Am Rev
651. Respir Dis 1988; 138:180-234.

562
CAPÍTULO XXIII: TROMBOEMBOLISMO PULMONAR

CAPÍTULO XXIII

Tromboembolismo pulmonar

Rodolfo Dennis, MD, MSc


Departamento de Medicina Interna
Fundación Cardio-Infantil
Bogotá

Alejandra Cañas, MD
Unidad de Neumología
Departamento de Medicina Interna
Hospital San Ignacio
Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l TEP se define como la oclusión total o


parcial de la circulación pulmonar por un
coágulo sanguíneo proveniente de la circula-
RELACIÓN ENTRE TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA
(TVP) Y TROMBOEMBOLISMO PULMONAR (TEP)

ción venosa sistémica, incluidas las cavida- El tromboembolismo venoso en pacientes


des cardiacas derechas. Se excluyen los agudamente enfermos es una patología co-
embolismos de otro tipo, como aéreo, tumoral, mún, en la cual están presentes todos los fac-
de líquido amniótico, séptico, etc. tores involucrados en su fisiopatogenia: esta-
sis venosa, lesiones de la pared del vaso y
aumento de la coagulación de la sangre. En
El trombo-embolismo pulmonar es una enfer- pacientes con TEP, la localización y extensión
medad potencialmente mortal, con frecuencia de la trombosis venosa extrapulmonar es útil
de 1 a 1,8 por cada 1.000 habitantes en la po- en la estimación de la probabilidad de even-
blación general. Es la causa más prevenible tos embólicos futuros y en la elección del mejor
de mortalidad en pacientes hospitalizados en tratamiento. Se debe tener presente que la
los Estados Unidos, donde ocurren más de mitad de los pacientes con TVP desarrolla
200.000 muertes por año. Es conocido que el TEP, y que se puede encontrar enfermedad
riesgo de muerte aumenta con la edad avan- venosa profunda en los miembros inferiores
zada, tabaquismo, enfermedad cardiovascular, en 82% de los casos de TEP.
insuficiencia cardiaca congestiva, insuficiencia
renal crónica y malignidad, que causan el 10% La gran mayoría de los TEP son asintomáticos.
de las muertes en hospitales y que son factor Un porcentaje significativo de los mismos que
contribuyente en 15% de todas ellas. no llega a ser sospechado, ocasionalmente es
fatal. A su vez, es frecuente hacer diagnósticos
falsos positivos. Establecer el diagnóstico pre-
ciso evita la recurrencia de un evento que pue-
da comprometer la vida del paciente.

563
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DIAGRAMA DE FLUJO PARA DIAGNÓSTICO DE LA TVP

FIGURA 1. Algoritmo sugerido para el diagnóstico de la TVP.

Tomado del Primer consenso colombiano para la prevención del tromboembolismo venoso en el paciente médico.

El diagnóstico clínico de la TVP es impreciso nos es muy variable, con sensibilidad que os-
y requiere confirmación objetiva (Tabla 1). La cila entre 13% y 97% y especificidad entre 3%
presencia de dolor y tensión en la pantorrilla y 88%. La baja sensibilidad expone a una alta
(signo de Homan positivo) y edema del muslo mortalidad y la baja especificidad expone tanto
y la pantorrilla obligan a descartar TVP con a alta morbilidad como a incrementar costos.
exámenes, pues el rendimiento de estos sig-

564
CAPÍTULO XXIII: TROMBOEMBOLISMO PULMONAR

TABLA 1. SENSIBILIDAD Y ESPECIFICIDAD DE HALLAZGOS CLÍNICOS EN EL DIAGNÓSTICO


DE TROMBOSIS VENOSA PROFUNDA

Sensibilidad (%) Especificidad (%)


Dolor gemelar 66-91 3-87
Molestia gemelar 56-82 26-74
Signo de Homan 13-48 39-84
Edema 35-97 6-88

El patrón oro en el diagnóstico de la TVP de de urgencias, por el costo y su baja disponibi-


miembros inferiores es la flebografía de con- lidad.
traste, pero es un método invasivo con irradia-
ción, tiene riesgo de complicaciones por la
inyección de contraste, y hasta en 10 a 20% ULTRASONIDO VENOSO POR COMPRESIÓN
da lugar a interpretación inadecuada, depen- (TIEMPO REAL MODO-B)
diendo de la calidad del examen y de la expe-
riencia del operador. Las pruebas diagnósticas Se encuentra disponible en la mayoría de los
de TVP no invasivas han demostrado su utili- servicios de urgencias y sirve para diagnosti-
dad, y por ello actualmente sólo en raras oca- car TVP proximal. Si se combina con el do-
siones se recurre a la venografía. Las prue- ppler, que sólo agrega información sobre flujo
bas no invasoras son la pletismografía de im- sanguíneo, se obtiene el ultrasonido dúplex,
pedancia (PGI) y, más recientemente, el ul- y si se agrega doppler a color se logra una
trasonido modo B de tiempo real, el ultrasoni- mejor evaluación del flujo en trombos no oclu-
do doppler a color (conocido como “eco tri- sivos, en estudios de pantorrilla y estudios de
ple” entre nosotros) y las imágenes gama- pacientes obesos.
gráficas con anticuerpos marcados.
Tiene valor para distinguir entre TVP aguda o
crónica según las características de ecogenici-
PLETISMOGRAFÍA DE IMPEDANCIA (PGI) dad del trombo, la luz venosa, la compresibili-
dad y la presencia de venas colaterales. La
Es excelente para TVP proximal (sensibilidad sensibilidad varía entre 89% y 100% y la es-
de 95% y especificidad de 96%), pero no tan pecificidad entre 86% y 100% (Tabla 2). Tie-
útil en la pantorrilla. La PGI seriada, hasta 10 ne la ventaja de poder detectar otras enfer-
y 14 días, puede detectar la propagación proxi- medades de miembros inferiores como quis-
mal de trombos desde la pantorrilla misma. tes de Baker, hematomas intramusculares pro-
Es poco costosa, portátil y de fácil capacitación fundos y superficiales, adenopatías, aneuris-
para el operador. Se presentan falsos positivos mas de la arteria femoral, tromboflebitis y abs-
por aumento de la presión intraabdominal, cesos. La sensibilidad disminuye en las ve-
aumento de la presión venosa central, dismi- nas pélvicas y debajo de la pantorrilla.
nución del flujo arterial a los miembros inferio-
res y obstrucción no trombótica del flujo veno- Algunos pacientes pueden tener TEP y a la
so. No sirve en la TVP de miembros superio- vez un ultrasonido venoso de miembros in-
res, y no es un examen útil para un servicio feriores negativo. En los casos en que la

565
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

gamagrafía de ventilación perfusión no sea tre el quinto y el séptimo día. En los miembros
diagnóstica y el ultrasonido inicial sea negati- superiores la sensibilidad es de 78% a 100%,
vo, se puede realizar ultrasonido seriado en- y 36% de estos pacientes desarrollan cuadros
de TEP.

TABLA 2.

Prueba Sensibilidad Especificidad LR (+) LR (-)


USC 95% 95% 19 0,05
Dúplex 97% 95% 20 0,05

LR: Likelyhood ratio.

VENOGRAFÍA DE CONTRASTE (VC) el buen rendimiento de los exámenes menos


invasores. También se usa en las extremida-
Se mantiene como el patrón oro para el diag- des superiores. Está contraindicada en la fa-
nóstico de la TVP con sensibilidad y especifi- lla renal aguda y crónica con creatinina >2 mg/
cidad cercanas al 100%. Actualmente se em- dL. No se recomienda como estudio rutinario
plea muy raramente en la práctica clínica por de la TVP.

DIAGRAMA DE FLUJO PARA DIAGNÓSTICO DE TEP

Masivo

Figura 2: Algoritmo para el diagnostico del TEP en Urgencias. Los porcentajes indican el número de pa-
cientes que requieren llegar hasta ese examen o tratamiento.

566
CAPÍTULO XXIII: TROMBOEMBOLISMO PULMONAR

Menos del 50% de los pacientes con TEP pre- Diagnóstico diferencial del TEP: neumonía,
sentan signos clínicos típicos, y más del 50% bronquitis, asma, EPOC exacerbada, infarto
de individuos con signos y síntomas clínicos agudo del miocardio, edema pulmonar, disec-
típicos de TEP no tienen TEP. Dos terceras par- ción aórtica, cáncer pulmonar, ansiedad, neu-
tes de las embolias pulmonares diagnosticadas motórax, costocondritis e hipertensión
por la clínica no se confirman y no se tratan. pulmonar.

Factores de riesgo para TEP: antecedente La disnea inexplicable, con o sin ansiedad, el
previo de TEP, antecedente de TVP, cirugía dolor pleurítico, la hemoptisis, el colapso he-
mayor, neoplasias, trauma, inmovilismo, uso modinámico y la muerte súbita, son signos,
de anticonceptivos orales, obesidad, falla car- síntomas y eventos que pueden ocurrir en el
diaca, enfermedad cardiovascular, edad ma- TEP.
yor de 40 años, hipercoagulabilidad y enferme-
dades autoinmunes. Los síntomas de mayor relevancia son (Tabla 3):

TABLA 3.

Sensibilidad Especificidad LR(+) LR(-)


Disnea súbita 78,2% 70,8% 2,67 0,3
Dolor torácico 16,3% 90,2% 1,66 0,92
Síncope 26,2% 87,2% 1,44 0,95

LR: Likelyhood ratio.

ELECTROCARDIOGRAMA (ECG) normal en pacientes sin enfermedad cardio-


pulmonar previa y en pacientes jóvenes.
Muestra cambios inespecíficos, siendo más
frecuente la taquicardia sinusal. Se pueden
apreciar cambios en la onda T, en el segmento RADIOLOGÍA DE TÓRAX
ST y desviación del eje a la derecha o la iz-
quierda. Una tercera parte de los pacientes Generalmente muestra anormalidades no es-
con TEP masivo pueden tener cambios de cor- pecíficas, como atelectasias, derrame pleural,
pulmonale agudo con S1 y Q3, bloqueo de infiltrados pulmonares y elevación de los hemi-
rama derecha, onda P pulmonar y desviación diafragmas. Los hallazgos clásicos son infre-
del eje a la derecha. cuentes: infarto pulmonar, “joroba” de Hamp-
ton, derrame pleural unilateral o bilateral con
GASIMETRÍA ARTERIAL el llamado “corazón sumergido” o zonas loca-
lizadas con disminución de la vascularización
Frecuentemente muestra hipoxemia con hipo- (signo de Westermark). La radiografía de tó-
capnia y aumento en la diferencia alvéolo-arte- rax normal en paciente con hipoxemia y dis-
rial de oxígeno, P(A-a)O2, la cual es mayor de nea severa, sin evidencia de broncoespasmo
20 mmHg en 86% de los casos. Puede ser o cardiopatía, sugiere fuertemente el TEP.

567
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ECOCARDIOGRAFÍA GAMAGRAFÍA DE VENTILACIÓN/


PERFUSIÓN (GAMAGRAFÍA V/Q)
No es específica de TEP, aunque tiene alguna
importancia diagnóstica y quizas pronóstica, Se la ha considerado como la prueba diagnós-
siempre y cuando el paciente no tenga enfer- tica más importante en el TEP agudo. Se fun-
medad cardiaca previa. Hallazgos ecocardio- damenta en la premisa de que la mayoría de
gráficos de cor-pulmonale agudo con disfun- las enfermedades pulmonares producen de-
ción ventricular derecha, hipertensión pulmo- fectos de perfusión y de ventilación y que, por
nar, coágulos en cavidades derechas y trom- el contrario, en el TEP los defectos de perfu-
bos en arterias pulmonares proximales apo- sión no se acompañan de defectos ventilato-
yan la presencia de TEP. Con la ecocardio- rios. La interpretación de las gamagrafías de
grafía transesofágica pueden visualizarse V/Q dependen de la presencia, talla y corres-
trombos grandes en las arterias pulmonares, pondencia de los defectos de la ventilación y
lo cual facilita el creciente uso de trombolíticos perfusión (Tabla 4).
en el manejo del embolismo masivo.
A pesar de la baja sensibilidad, su precisión
es cercana a 90%.

TABLA 4. CRITERIOS PARA LA INTERPRETACIÓN DE GAMAGRAFÍAS DE V/Q.

Normal No hay defectos de perfusión


Alta probabilidad Dos o más defectos mayores segmentarios con radiografía normal o defectos ventilatorios
no correspondientes.
Dos o más defectos medianos segmentarios más uno grande sin defectos radiográficos ni
de ventilación
Cuatro defectos moderados segmentarios sin defectos radiográficos ni de ventilación.
Probabilidad intermedia No cae ni en alta ni en baja probabilidad
“Indeterminado”
Baja probabilidad Un defecto moderado con rayos X normal
Defectos menores segmentarios con rayos X normal
Defectos de perfusión comprometiendo menos de cuatro segmentos en un pulmón y no más
de tres segmentos en una región de cualquier pulmón con los defectos correspondientes en
la ventilación, iguales o mayores en talla
Defectos de perfusión no segmentarios (borramiento de ángulo costofrénicos por derrame pleural,
cardiomegalia, aorta elongada, hilio o mediastino prominente o hemidiafragma elevado).

568
CAPÍTULO XXIII: TROMBOEMBOLISMO PULMONAR

TABLA 5. INCIDENCIA TEP SEGÚN GAMAGRAFÍA PERFUSIÓN

Probabilidad clínica Gamagrafía TEP (%)


Alta Compatible TEP 99
Intermedia Compatible TEP 92
Baja Compatible TEP 59
Alta Anormal no TEP 71
Intermedia Anormal no TEP 10
Baja Anormal no TEP 1

Los datos disponibles sugieren que la infor- Cuando las gamagrafías no son diagnósticas,
mación obtenida de una gamagrafía de perfu- los estudios de miembros inferiores pueden
sion es útil si es de alta o baja probabilidad, ayudar a definir la necesidad de anticoagular
así como si es normal. Si la probabilidad es los pacientes: una gamagrafía indeterminada
considerada intermedia, la gamagrafía V/Q con ultrasonido de miembros inferiores nega-
puede cambiar la interpretación a una proba- tivo evoluciona bien sin anticoagulación. Tam-
bilidad más definida. Una gamagrafía de Q bién, si la sospecha clínica es baja, una
normal puede ahorrar costos y hospitalizacio- gamagrafía normal o de baja probabilidad
nes innecesarias, ya que puede obviar la ga- descarta el diagnóstico (Tabla 6).
magrafía de V si la de Q es normal. En pacien-
tes con enfermedad cardiovascular y pulmonar
previas, es necesario realizar la V/Q.

TABLA 6. EFICACIA DIAGNÓSTICA DE LA GAMAGRAFÍA DE VENTILACIÓN - PERFUSIÓN

RESULTADO SENSIBILIDAD ESPECIFICIDAD LR(+) LR(-)


Probabilidad alta 40,87% 97,63% 17,2 0,6
Intermedia 41,26% 62,04% 1,08 0,94
Baja 15,87% 59,68% 0,39 1,4
Normal 0,01% 80,62% 0,0005 1,24

LR: Likelihood ratio

En resumen, cuando la gamagrafía es infor- tar el diagnóstico de embolismo pulmonar;


mada como de alta probabilidad suele ser su- cuando el resultado es de probabilidad inter-
ficiente para confirmar TEP; cuando es infor- media o baja, no tiene valor diagnóstico y ofre-
mada como normal es suficiente para descar- ce poca ayuda.

569
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ANGIOGRAFÍA POR TOMOGRAFÍA AXIAL 0,2%. En general, cuando un diagnóstico de-


COMPUTADORIZADA HELICOIDAL finitivo es necesario, el beneficio sobrepasa a
(ANGIOTAC HELICOIDAL) los riesgos, y por ello la angiografía y la flebo-
grafía se reservan para pacientes inestables
Requiere medio de contraste y su mayor limi- en quienes el riesgo de anticoagulación o de
tación es la pobre visualización de émbolos tratamiento trombolítico es alto y un diagnós-
en las áreas periféricas de los lóbulos inferio- tico equivocado puede ser fatal.
res y superiores. La sensibilidad y especifici-
dad oscila alrededor de 95%. Tiene mayor sen-
sibilidad en trombos de arterias pulmonares TRATAMIENTO
principales, lobares y segmentarias, pero no
así en las arterias subsegmentarias donde la Es muy raro que se logre establecer el diag-
sensibilidad es baja. nóstico de TEP con probabilidad de 100%.
Para enfrentar el problema, una buena aproxi-
En los últimos dos años aparecen en la litera- mación es determinar la relación entre el be-
tura trabajos que muestran un rendimiento si- neficio derivado de iniciar terapia con un diag-
milar al de la angiografía pulmonar, y en algu- nóstico incierto y los riesgos que ésta conlleva.
nos protocolos se comporta mucho mejor que
la gamagrafía de V/Q, sobre todo en aquellos Existe excelente evidencia que demuestra la
pacientes con radiografías de tórax anorma- utilidad de la anticoagulación en el tratamien-
les y en pacientes inestables. Es posible que to del TEP, con NNT (Numero necesario a tra-
este examen reemplace pronto a la gamagra- tar) entre 4 y 5. El riesgo de sangrado fatal es
fía de V/Q, dado el valor agregado de identifi- relativamente bajo y el balance riesgo/benefi-
car simultáneamente otras patologías pulmo- cio está a favor de la anticoagulación. Se su-
nares. Hasta el momento, desde el punto de giere que en el paciente clínicamente estable,
vista diagnóstico de TEP, este examen puede la anticoagulación no debe iniciarse, excepto
ser ordenado en vez de la gamagrafía en el para prevenir el TEP recurrente.
algoritmo propuesto.
El tratamiento de la enfermedad tromboembó-
lica venosa en la gran mayoría de las situacio-
ARTERIOGRAFÍA O nes de la práctica clínica diaria involucra hospi-
ANGIOGRAFÍA PULMONAR talizar al paciente e iniciar heparinas de bajo
peso molecular (HBPM, recomendación A). Las
Es considerada como el patrón oro. Está indi- HBPM constituyen una alternativa ambulatoria
cada en pacientes con sospecha de TEP con más costo-efectiva en grupos de pacientes con
compromiso hemodinámico y ecocardiografía TVP y embolia pulmonar seleccionados por su
o gamagrafía no diagnósticas, con ultrasonido bajo riesgo de complicaciones (Recomenda-
negativo y mala reserva cardiopulmonar. Es ción A). La HBPM se administra por vía subcu-
innecesaria si la gamagrafía de V/Q es normal. tánea dos veces al día, concomitante con
La tasa de mortalidad asociada con la arterio- warfarina sódica por vía oral para el tratamiento
grafía pulmonar es 0,5%. Se presenta compro- a largo plazo. Ejemplos de HBPM incluyen
miso cardiopulmonar con necesidad de reani- enoxaparina, nadroparina y tinzaparina.
mación e intubación en 0,4% de los casos, la
falla renal que requiere diálisis en 0,3% y los En el manejo hospitalario también puede utili-
hematomas que requieren transfusión en zarse la heparina no fraccionada IV (Reco-

570
CAPÍTULO XXIII: TROMBOEMBOLISMO PULMONAR

mendación A) en infusión continua (1.200 a Entre los días 1 y 3 del tratamiento se inicia
1.300 unidades/hora), precedida de una dosis warfarina sódica por vía oral, con el fin de
de carga (5.000 unidades IV), para mantener suspender la heparina IV y dar de alta una
el tiempo parcial de tromboplastina activado vez la razón internacional normalizada (INR)
(APTT) en un limite no inferior a 1,5 y no mayor se haya elevado (Recomendación B). Las mu-
de 2,5 (Tablas 7 y 8). La eventualidad de trom- jeres embarazadas tienen indicación formal de
bocitopenia asociada a heparina (cuya mani- heparina subcutánea durante el resto del em-
festación paradójica es el incremento de la ac- barazo, debido al potencial teratogénico de la
tividad pro-coagulante) debe monitorearsese warfarina y a que cruza fácilmente la placenta.
durante el tiempo que el paciente la reciba. Las heparinas de bajo peso molecular ofre-
cen una alternativa atractiva a la heparina no
fraccionada (Recomendación B).

TABLA 7. RECOMENDACIÓN GENERAL DE ANTICOAGULACIÓN CON HNF IV EN EL TROMBOEMBOLÍSMO VENOSO (TEV).

TEV Recomendación
Sospecha: Obtener niveles basales de APTT, PT y hemograma.
Documentar ausencia de contraindicación para anticoagulación formal.
Administrar heparina 5.000 U IV e iniciar secuencia diagnóstica.
Conclusívo: Administrar un segundo bolo IV de 5-10.000 U e iniciar infusión con 800-1.300 U/h.
Verificar APTT a las seis horas y mantener entre 1,5 y 2,5 veces el control del día.
Verificar diariamente el recuento de plaquetas.
Iniciar warfarina sódica 5 a 10 mg VO entre el primer y tercer día de tratamiento y luego
seguir a la dosis diaria estimada.
Anticoagular con warfarína sódica mínimo por tres meses con INR entre 2 y 3 (tratamien-
tos más prolongados están indicados cuando los factores de riesgo persisten o hay trom-
bosis recurrente).

Modificado de: Quick Reference Guide for Clinicians. The fourth ACCP Consensus. Statement on Antithrombotic Therapy. Chest 1995; 225S-522S.

TABLA 8. VIGILANCIA Y AJUSTE DE DOSIS DE HEPARINA NF IV EN EL TROMBOEMBOLISMO VENOSO (*)

APTT (¨) Tasa de Cambio Dosis de Cambio Intervención Adicional Próximo Control
(mL / h) (U / 24 h) de APTT
≤ 45 +6 +5760 Bolo de 5000 U 4-6 h
46-54 +3 +2880 Ninguna 4-6 h
55-85 (·) 0 0 Ninguna Día siguiente (Ä)
86-110 -3 -2880 Suspender infusión 1 h 4-6 h del reinicio
>110 -6 -5760 Suspender infusión 1 h 4-6 h del reinicio

Modificado de: Quick reference guide for clinicians. The fourth ACCP Consensus Statement on Antithrombotic Therapy. Chest 1995; 225S-522S.
(*) Dosis de carga y de mantenimiento como mostrado en la Tabla 5. Cuando el APTT se verifica a las seis o más horas, se asume farmacocinética
de estado estable. Los ajustes en las dosis se hacen de acuerdo a estas premisas.
(¨) Rango normal esperado de APTT de 27 a 35 s.
(·) Rango terapéutico esperado de APTT. Este rango (55-85) varía de acuerdo a diferentes reactivos y cronómetros; debe, por lo tanto, estimarse
en cada laboratorio.
(Ä) Durante las primeras 24 h, repetir en 4-6 h. Posteriormente, vigilar diario a menos que el APTT este por fuera del rango terapéutico.

571
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Debe recordarse que el principal factor de ries- siderarse el uso de filtros (sombrillas) en las
go de sangrado durante el tratamiento con venas cavas (Recomendación B). Se ha es-
warfarina es la dosis, que debe ser únicamente peculado que la colocación de filtros pudiera
la necesaria para mantener el INR entre 2 y 3 ser el manejo de elección inicial en politrau-
(Recomendación B). Todo paciente debe reci- matismo severo, donde existe simultáneamen-
bir antes de ser dado de alta indicaciones so- te alto riesgo tanto de sangrado como de trom-
bre los signos de peligro y el control médico boembolismo (Recomendación C). Sin embar-
de la anticoagulación con warfarina. La dura- go, estudios recientes parecen demostrar que
ción del tratamiento no se conoce con certe- en este grupo las HBPM pueden también
za; sin embargo, se sabe que un régimen de constituir una estrategia segura y efectiva (Re-
seis semanas es menos eficaz, en términos comendación B).
de tromboembolismo venoso recurrente, que
el de seis meses. Probablemente la duración
ideal esté entre tres y seis meses, dependien- LECTURAS RECOMENDADAS
do de si los factores de riesgo identificados
fueron o no reversibles (Recomendación B). 1. Amoliga A, Matthay M, Matthay R. Pulmonary
thromboembolism and other pulmonary vascular
diseases: En: Chest Medicine: Essentials of
Existe un renovado interés sobre el tratamien- Pulmonary and Critical Care Medicine. Editado por
to trombolítico (estreptokinasa, urokinasa, rt- RS George , RW Light, MA Matthay, et al. Williams
PA), tanto en su manifestación inicial (TVP) & Wilkins. Baltimore, 2000.
como en el manejo de la EP. La trombolisis y 2. Barrit Dw, Jordan SC. Anticoagulant drugs in the
el manejo del paciente hemodinámicamente treatment of pulmonary embolism, a controlled
inestable o en insuficiencia respiratoria debe trial. Lancet 1960; 1:1309-1312.
hacerse en la UCI (Recomendación C). 3. Burton W lee, MD, Stephen I, Stasior D, et al.
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Evidencia. Massachusetts General Hospital. Ed
Aunque no hay evidencia experimental sólida Marban. Madrid, 1999.
que sustente la eficacia de los agentes trombo- 4. Dennis RJ, Arboleda MN, Rodríguez MN, et al.
líticos en la TVP, en ausencia de contraindica- Estudio nacional sobre tromboembolismo venoso
ción (i.e., cirugía reciente), su uso puede ser en población hospitalaria en Colombia. Acta Méd
considerado en el paciente joven con trombo- Col 1996; 21:55-63.
sis venosa masiva y compromiso circulatorio 5. Dennis RJ. Tromboembolismo Venoso.‘En: Neu-
del miembro afectado (flegmasía), con la inten- mología. Editado por J Roa, M Bermúdez, R Ace-
ro. McGraw-Hill. Bogotá, 2000.
ción de disminuir la probabilidad de embolias
6. Dolovich L, Ginsberg S, Dorketis M. A meta ana-
y la aparición del síndrome postflebìtico (Reco- lysis comparing low molecular weight heparins with
mendación B). En ausencia de contraindica- unfractionated heparin in the treatment of venous
ción, su uso también podría contemplarse en thromboembolism. Arch Intern Med 2000; 160:181-
el paciente con embolia pulmonar severamen- 188.
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quienes éste no ha sido efectivo, puede con- 2001; 119:132S-175S.

572
CAPÍTULO XXIII: TROMBOEMBOLISMO PULMONAR

9. Goldhaber S, De Rosa M, et al. International pulmonary embolism diagnosis. JAMA 1990;


Cooperative Pulmonary Embolism registry defects 263:2753-2759.
high mortality rate. Circulation 1999; 96:1-159. 14. Silverstein MD,Heit JA, Etal Trends in the
10. Goldhaber S. Pulmonary Embolism. N Eng J Med incidence of deep vein thrombosis and pulmonary
1998; 339:93-103. embolism: a 25 year population based study. Arch
11. Kollef MH, Predictive values of a rapid intern Med 1998; 158: 585-593.
semicuantitative D-dimer assay in critically ill 15. Simoneau G, Sors H, Charbonnier B, et al. Low
patients with suspected venous thromboembolism molecular weight heparin and unfractionated
disease. Crit Care Med 2000; 28: 414-420. heparin were equally effective for acute pulmonary
12. Miniati M, Marini C, Di Ricco G. Value of perfusion embolism. N Engl J Med 1997; 337:663-669.
lung scan in the diagnosis of pulmonary embolism: 16. Turkstra F, Kuijer PM et al. Diagnostic utility of
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acute pulmonary embolism diagnosis (PISA-PED). of having pulmonary embolism. Ann Intern Med
Am J Respir Crit Care Med 1996; 154:1387-1393. 1997; 126:775-781.
13. PIOPED investigators. Value of the ventilation/ 17. Walenga JM, Fareed J. Current status on new
perfusion scan in acute pulmonary embolism. anticoagulant and antithrombotic drugs and
Results of the prospective investigation of devices. Curr Opin Pulm Med 1997; 3: 265-267.

573
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXIV

Edema pulmonar agudo

Carlos Elí Martínez, MD


Jefe, Unidad de Cuidado Intensivo Médico.
Sección de Neumología.
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA

S e define como edema pulmonar agudo la


acumulación anormal y de rápido desa-
rrollo de líquido en los componentes extravas-
aguda que puede llevar al síndrome de dificul-
tad respiratoria aguda como el edema pulmo-
nar de las alturas, el edema pulmonar neuro-
culares del pulmón, lo que incluye tanto el in- génico, el edema de re-expansión y el edema
tersticio pulmonar (fase intersticial del edema) asociado con los úteroinhibidores o tocolíticos.
como los espacios alveolares (edema En todos ellos la teoría fisiopatológica actual-
alveolar). mente aceptada es la del incremento de la per-
meabilidad vascular, con menor participación
Usualmente el edema pulmonar se separa en de los cambios hidrostáticos intravasculares.
dos grandes grupos: el edema cardiogénico y
los edemas no cardiogénicos. El primero se
asocia con la existencia de enfermedad agu- FISIOPATOLOGÍA
da o crónica cardiovascular.
Los edemas pulmonares de origen cardiogé-
Todas las causas de falla ventricular izquierda nico han sido explicados por la aparición de
crónica pueden llevar a edema pulmonar agu- un imbalance en las fuerzas que gobiernan el
do: el edema pulmonar cardiogénico suele ser mantenimiento del líquido dentro del espacio
en estos casos manifestación de la exacerba- intravascular, conocidas como ley de Starling
ción de la falla cardiaca crónica y los mecanis- de los vasos, que postula que el flujo de líqui-
mos desencadenantes pueden ser eventos do a través del capilar es dependiente del ba-
agudos asociados como el infarto, la emergen- lance entre las presiones hidrostáticas y oncó-
cia hipertensiva, la insuficiencia valvular agu- ticas a ambos lados de la membrana semiper-
da, las arritmias de reciente comienzo o la meable que funcionalmente es el endotelio y
hipervolemia. Todas estas causas tienen como que puede ser modulado por el grado en que
denominador común en su génesis la altera- dicho endotelio es permeable a las proteínas
ción de la presión hidrostática intravascular y plasmáticas. De acuerdo con esta teoría, el
son el tema principal de esta guía. acúmulo de líquido en el intersticio o en el al-
véolo pulmonar se debe a incremento en la
Los edemas pulmonares conocidos como no presión hidrostática (o en escasas ocasiones
cardiogénicos tienen diferentes causas, entre a descenso en la presión oncótica del plas-
las cuales se destacan la injuria pulmonar ma), que lleva a que el resultado neto sea el

574
CAPÍTULO XXIV: EDEMA PULMONAR AGUDO

escape de líquido desde el vaso o la incapa- de síntomas similares en los casos más agu-
cidad para su reabsorción. dos, como en la emergencia hipertensiva y en
el infarto agudo de miocardio. En estos casos
El incremento de la presión hidrostática sería se acepta que más que un incremento del
el resultado de la disfunción diastólica y sistó- volumen total de agua corporal, lo que ocurre
lica del ventrículo izquierdo (por la enfermedad es una redistribución del volumen periférico,
cardiaca aguda o crónica descompensada), que se dirige hacia el tórax y se acumula en
que se transmitiría a los vasos venosos pulmo- el pulmón, debido a la conjunción de un bajo
nares y se relaciona con el incremento de la índice cardiaco con incremento de la resisten-
presión capilar pulmonar. El líquido que esca- cia vascular sistémica, de manera que se en-
pa del vaso o que no puede ser reabsorbido cuentran alteradas tanto la función sistólica
se localiza inicialmente en el intersticio pulmo- como la diastólica del ventrículo izquierdo, que
nar y fluye en dirección central de manera que se refleja en el incremento de la presión veno-
pueda ser reatrapado por los vasos linfáticos sa pulmonar. Este concepto de aumento local
pulmonares, cuya función es dirigirlo hacia las del volumen intravascular en el pulmón, sin
venas sistémicas. Este factor de seguridad tie- concomitante aumento del volumen de líqui-
ne una capacidad muy amplia y en condicio- do corporal total, ha llevado a reevaluar el tra-
nes normales es el factor principal que impi- tamiento del edema pulmonar, para reconsi-
de el desarrollo del edema. Si se sobrepasa derar el papel de la diuresis excesiva y preferir
la capacidad de los linfáticos, el líquido en como estrategia terapéutica la manipulación
exceso se colecciona inicialmente en el inters- de la resistencia vascular sistémica y de la
ticio axial peribroncovascular y en el espacio función miocárdica.
subpleural. Si es insuficiente este espacio para
contenerlo o si continúa el ascenso de la pre- Finalmente, el papel de la barrera alvéolo-capi-
sión hidrostática, aparece el llenado alveolar. lar como una estructura pasiva en el edema
En el edema pulmonar cardiogénico se asu- cardiogénico también es materia de investiga-
me, además, que la permeabilidad endotelial ción; hay hallazgos sugestivos de que el ex-
no varía ni juega papel principal en la génesis. cesivo o inapropiado incremento de la resis-
En los edemas pulmonares no cardiogénicos tencia vascular sistémica (inapropiado en pre-
el llenado alveolar puede ser más temprano, sencia de una baja función contráctil miocár-
pues en su fisiopatología operan tanto las al- dica) puede deberse a activación endotelial y
teraciones hidrostáticas antes anotadas como del epitelio pulmonar, con liberación de media-
la aparición de anormalidades funcionales y dores inflamatorios y vasoconstrictores sisté-
anatómicas de la membrana alvéolo-capilar, micos, que pueden explicar recurrencia de la
con severa, difusa y rápida inundación del enfermedad o lenta respuesta en algunos
alvéolo. casos.

A pesar de que el desequilibrio de las fuerzas En general, los estudios clínicos en humanos
de Starling es la explicación prevaleciente para han confirmado la importancia de todos estos
el edema pulmonar cardiogénico, se ha acep- determinantes del desarrollo del edema pul-
tado siempre que deben existir otros factores monar agudo cardiogénico. En casi la mitad
adicionales, en razón a que la acumulación de los pacientes la función sistólica está con-
de líquido en el pulmón, con aumento del vo- servada; en los restantes hay depresión de la
lumen corporal total de agua, tardaría varios fracción de eyección y en casi 40% hay disfun-
días en aparecer y no explicaría el desarrollo ción valvular mitral. Los patrones hemodiná-

575
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

micos usuales son un índice cardiaco bajo en lemia o cuando el desarrollo del edema es
presencia de alta resistencia vascular sistémi- menos súbito, pueden encontrarse ingurgita-
ca y casi en todos los pacientes una presión ción yugular, hepatomegalia y edemas, como
capilar pulmonar por encima de 23 mmHg. La manifestación de la falla ventricular crónica
baja fracción de eyección parece asociarse descompensada. El examen cardiaco, en bus-
con la presentación clínica en la cual hay pre- ca de hipertrofia ventricular, definir el ritmo car-
sión arterial baja y, por el contrario, la función díaco o detectar signos de enfermedad valvu-
sistólica suele ser normal en quienes se pre- lar, lo mismo que la determinación de la pre-
sentan con presión normal o elevada, como sión arterial, permiten acercarse a la etiología
ocurre en las emergencias hipertensivas. de la cardiopatía subyacente o la de la causa
de la descompensación.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS
AYUDAS DIAGNÓSTICAS
El edema pulmonar agudo suele manifestarse
en forma típica como disnea severa que pue- El objetivo de las ayudas diagnósticas es por
de ser el incremento de la disnea crónica pre- una parte detectar y clasificar el edema pulmo-
via pero que siempre evoluciona de manera nar, y por otra acercarse a la etiología del ede-
muy rápida, aparición de esputo (en ocasiones ma. Los estudios auxiliares para la detección
típicamente rosado que puede ser de aspecto y clasificación del edema pulmonar agudo tie-
espumoso) y cianosis. Todos estos síntomas nen como principal problema su elevada sen-
son manifestación del incremento del trabajo sibilidad; los hallazgos son comunes o se com-
respiratorio por la disminución de la distensibi- parten con otras entidades nosológicas. Los
lidad pulmonar debido a la acumulación de lí- exámenes para definir la etiología tienen limi-
quido en el intersticio y del llenado alveolar taciones similares. Al analizar cada una de
por el edema. Pueden coexistir manifestacio- estas ayudas diagnósticas debe separarse su
nes o síntomas propios de la enfermedad que contribución al diagnóstico y a la búsqueda
desencadena el edema pulmonar, como el de la etiología.
dolor torácico en el caso de la enfermedad
coronaria. La diaforesis es manifestación de Cuando la presentación clínica es muy clara
la respuesta adrenérgica al edema o de la puede pasarse directamente a los exámenes
pobre perfusión periférica. que pueden determinar la etiología. El efecto
inmediato del edema sobre la transferencia
Los hallazgos clínicos más comunes son la de oxígeno en el pulmón (un importante deter-
incapacidad para tolerar el decúbito, la taqui- minante del aporte sistémico de oxígeno) debe
cardia, taquipnea y el hallazgo de ruidos agre- vigilarse inmediatamente con la oximetría de
gados pulmonares bilaterales, con mayor fre- pulso y los gases arteriales. Estos son los pri-
cuencia estertores alveolares y sibilancias. meros exámenes a tomar y la oximetría debe
Puede haber roncus y si el tiempo de evolución mantenerse en forma continua como una
de los síntomas no es corto y han alcanzado manera de vigilar la terapia.
a desarrollarse los mecanismos de compen-
sación a través de la reabsorción de líquido Establecida la sospecha clínica, la radiogra-
hacia la pleura, los ruidos respiratorios pueden fía del tórax es uno de los primeros exáme-
estar opacados por los hallazgos compatibles nes a ordenar. Los hallazgos compatibles con
con derrame pleural. En presencia de hipervo- edema pulmonar varían de acuerdo con la

576
CAPÍTULO XXIV: EDEMA PULMONAR AGUDO

velocidad de instauración y el estadio en que fases más avanzadas. La presencia de hiper-


se encuentra la enfermedad. En las primeras trofia ventricular o auricular también apunta
etapas, cuando solamente hay aumento de la hacia la etiología cardiaca. El ritmo cardiaco,
presión hidrostática intravascular, los signos con la identificación de arritmias que compro-
pueden ser muy sutiles y el único hallazgo es meten el gasto cardiaco, tiene importancia
la ingurgitación de los vasos hacia los lóbulos para decidir el manejo específico de la causa
superiores, que adquieren un diámetro igual desencadente del edema pulmonar. La deter-
o superior a los de los lóbulos inferiores, en minación de marcadores de lesión miocár-
un signo que ha sido llamado cefalización del dica como creatin-kinasa fracción MB y tropo-
flujo. nina tienen importancia para orientar hacia un
evento coronario agudo y también para de-
Cuando el líquido acumulado se localiza pre- terminar el pronóstico, más ominoso si hay
dominantemente en el intersticio se encuen- elevación de la troponina.
tran manguitos peribronquiales centrales, bo-
rramiento de los márgenes de los vasos pul- El ecocardiograma es de gran importancia
monares y mala definición de los hilios pulmo- en la confirmación del diagnóstico y la identi-
nares. La acumulación de líquido en los linfáti- ficación de las anormalidades de contractili-
cos los hace visibles como líneas septales dad segmentaria en la enfermedad coronaria,
(opacidades lineales delgadas perpendicula- la dilatación global o la hipertrofia ventricular
res a la pleura o lineas de Kerley) y pueden en la falla cardiaca izquierda agudizada, la
hacerse más notorias las cisuras por la pre- alteración en la función diastólica en esta mis-
sencia de líquido en ellas. ma entidad nosológica y la disfunción valvular
aguda (como complicación del infarto de mio-
Al progresar la acumulación de líquido hasta cardio) o crónica (como parte del síndrome
llegar a llenar el alvéolo, hay aparición de in- de falla cardiaca o de la enfermedad coronaria
filtrados alveolares bilaterales, generalmente crónica).
simétricos, más notorios en los dos tercios
centrales del pulmón. La radiografía puede El cateterismo cardiaco derecho para me-
servir en la identificación de la etiología (es- dir directamente la presión capilar pulmonar y
pecialmente del edema cardiogénico) median- el gasto cardíaco y calcular la resistencia
te la evaluación del tamaño de la silueta car- vascular sistémica puede ser necesario cuan-
diaca; también puede llevar a sugerir como do los datos son insuficientes para la diferen-
etiología del edema pulmonar las causas “no ciación entre el edema cardiogénico (hidrostá-
cardiogénicas”, cuando el tamaño de la silue- tico o con presión capilar pulmonar elevada)
ta y del pedículo vascular es normal, la distri- y los edemas no cardiogénicos (de permeabi-
bución de las opacidades es asimétrica o en lidad o usualmente con presión pulmonar ca-
parches, especialmente en ausencia comple- pilar normal).
ta de compromiso pleural y de líneas septales.

El electrocardiograma tiene utilidad para la TRATAMIENTO


identificación de la etiología y del factor desen-
cadenante del edema pulmonar agudo. De- Dos componentes principales de la terapia del
ben buscarse signos sugestivos de lesión edema pulmonar deben separarse:
coronaria aguda, evaluar las desviaciones del • El manejo de la enfermedad que ha des-
segmento ST o la aparición de ondas Q en encadenado el edema.

577
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• El manejo del edema mismo para mante- un balance negativo de líquidos, lo que secun-
ner la transferencia de oxígeno y soportar dariamente llevará a aliviar el edema alveo-
la función circulatoria, de manera que no lar. En los casos de desarrollo más agudo y
se comprometa el aporte sistémico de oxí- aunque no haya signos obvios de sobrecarga
geno y se prevenga la falla respiratoria in- de volumen, el diurético sigue siendo de utili-
minente. dad, pues tiene efectos venodilatadores, con
disminución de la precarga por descenso de
El manejo de la enfermedad subyacente o la presión capilar pulmonar y la presión venosa
desencadenante que llevó al edema pulmo- central. En estudios clínicos se ha demostrado
nar agudo es motivo de cada una de las guías que las dosis de diuréticos no deben superar
para las enfermedades respectivas (arritmias, los 80 mg en bolo intravenoso. En algunos
enfermedad coronaria aguda, falla cardiaca). casos puede aparecer en los primeros minutos
El tratamiento de soporte cardiopulmonar de la aplicación del diurético un efecto de in-
inmediato incluye el uso de oxígeno, diuréti- cremento transitorio de la resistencia vascular
cos, nitratos vasodilatadores y medicamentos sistémica, razón por la que también se indica
con actividad inotrópica positiva. su uso en dosis no mayores de las anotadas,
y por la que deben considerarse como parte
El primer paso en el tratamiento es colocar al del tratamiento, pero no como la única medi-
paciente en posición semisentado y adminis- da terapéutica.
trar oxígeno. La posición semisentado busca
contrarrestar la redistribcuión del líquido in- Los nitrovasodilatadores deben usarse en
travascular, lo que disminuye el retorno veno- todos los casos de edema pulmonar agudo
so al tórax, por lo cual, de ser posible, se de- cardiogénico, debido a su capacidad para dis-
ben dejar los miembros inferiores colgando al minuir la precarga y la postcarga, sin aumentar
borde de la cama. El suministro de oxígeno el consumo de oxígeno por el miocardio y con
debe hacerse con una fracción inspirada alta, efectos aún más notorios cuando el factor de-
suficiente para mantener una saturación su- sencadenante es el infarto del miocardio. Si
perior a 90%. no se dispone de vía venosa puede usarse
dinitrato de isosorbde sublingual cada cinco
Si hay posibilidad de retención de dióxido de minutos. Si hay una vía venosa y se dispone
carbono asociada con altas fracciones inspi- del medicamento, debe considerarse dinitrato
radas de oxígeno o si el edema es severo, se de isosorbide intravenoso en bolos o nitrogli-
puede considerar la ventilación no invasora cerina en infusión continua. La vigilancia de
con máscara facial. La ventilación no invaso- la respuesta clínica y de las cifras de presión
ra brinda en forma temprana los efectos posi- arterial deben llevar a decidir la dosis óptima
tivos de la presión positiva al final de la espi- o a titular la droga según la respuesta. El des-
ración (PEEP) para redistribuir el líquido intra- censo de la saturación de oxígeno, por vaso-
alveolar e intersticial. Si la oxigenación no me- dilatación excesiva, también es un indicador
jora o el edema pulmonar es severo, debe con- de que se ha llegado a las dosis máximas del
siderarse la ventilación invasora y proceder vasodilatador.
con la intubación endotraqueal.
Por décadas se ha utilizado morfina intrave-
La administración de diuréticos de asa como nosa o subcutánea (bolos de 4-8 mg cada dos
furosemida busca en los casos de lento de- horas) en el edema pulmonar agudo, aprove-
sarrollo una respuesta diurética que lleve a chando su efecto vasodilatador que reduce

578
CAPÍTULO XXIV: EDEMA PULMONAR AGUDO

tanto la precarga como la poscarga cardiaca, diferentes. Deben mantenerse algunas claves
y su capacidad como simpaticolítico, que pue- para el diagnóstico y deben revisarse las guías
de disminuir la ansiedad y el consumo de oxí- correspondientes a cada uno de ellos. En el
geno por el miocardio, especialmente en ca- postparto o en el último trimestre del embarazo
sos de enfermedad coronaria aguda. Existe la paciente con edema pulmonar debe ser inte-
el riesgo de más frecuente necesidad de ven- rrogada sobre la administración reciente de
tilación invasora y de admisión a cuidado in- uteroinhibidores o tocolíticos, que pueden te-
tensivo con este medicamento, por lo cual de- ner efectos cardiovasculares deletéreos si se
be administrarse bajo vigilancia adecuada y usan en altas dosis. En el paciente con inter-
no como medicamento inicial ni de primera vención quirúrgica reciente o intubación tra-
elección, si no después del diurético, el vaso- queal con retiro reciente y disfonía o signos
dilatador y de las medidas generales. de obstrucción de las vías aéreas superiores
debe considerarse el edema pulmonar mecá-
Los inotrópicos positivos, especialmente nico por presión negativa intratorácica excesi-
aquellos con algún grado de efecto vasodila- va en presencia de insuficiente ventilación. En
tador, pueden ser necesarios en el manejo del jóvenes o pacientes con historia de abuso de
edema agudo de pulmón (dopamina, dobuta- drogas debe indagarse por el uso de narcóti-
mina) pero por sus potenciales efectos crono- cos, otra causa potencial de edema pulmonar.
trópicos y arritmogénicos también deben se- Finalmente, en quienes han ascendido recien-
leccionarse con vigilancia apropiada y sola- temente a sitios de mayor altitud, proveniente
mente después de las medidas iniciales y los del nivel del mar o de zonas más bajas, espe-
medicamentos antes señalados como de pri- cialmente si viven en altura o si hay historia
mera elección. Estos inotrópicos positivos, previa de dificultad respiratoria con el ascen-
especialmente la dopamina, pueden llegar a so, debe sospecharse edema pulmonar de las
tener gran importancia en el manejo poste- alturas. En todos estos casos la administra-
rior, como medida para facilitar la remoción ción de oxígeno es el primer paso, pero las
del líquido alveolar, pues parece que el prin- demás medidas de manejo son específicas
cipal mecanismo por el que esto ocurre cuan- para cada entidad nosológica.
do se han sobrepasado los mecanismos de
defensa venosos y linfáticos, es la reabsorción
desde el alvéolo por el epitelio mediante pro- CRITERIOS DE REFERENCIA
moción de la función y expresión de la bomba
de sodio-potasio ATPasa, que podría ser in- El proceso inicial de diagnóstico del paciente
ducida por algunos simpaticomiméticos. con edema pulmonar puede y debe hacerse
en forma expedita en el servicio de urgencias.
Debe referirse al especialista apropiado,
OTRAS FORMAS DE EDEMA usualmente al especialista en cardiología, en
PULMONAR AGUDO cuanto se inicien las medidas de manejo. En
los casos con falta de respuesta al manejo
En el diagnóstico diferencial del edema pulmo- inicial debe considerarse la hospitalización en
nar agudo cardiogénico deben incluirse otras cuidado intensivo, en particular para el mane-
formas de edema pulmonar menos frecuen- jo de la ventilación no invasora o de la falla
tes (si se excluye el síndrome de dificultad respiratoria que requiera intubación. Las cau-
respiratoria aguda), pues las medidas terapéu- sas desencadenantes o la enfermedad sub-
ticas y los estudios diagnósticos pueden ser yacente, como enfermedad coronaria aguda,

579
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

disfunción valvular aguda o severa, también LECTURAS RECOMENDADAS


constituyen criterio de hospitalización en cui-
dado intensivo y de referencia al cardiólogo. 1. Betancur AG, Rieck J, Koldanov R. Acute
pulmonary edema in the emergency department:
clinical and echocardiographic survey in an aged
population. Am J Med Sci 2002; 323:238-243.
RECOMENDACIONES SOBRE 2. Cotter G, Kaluski E, Moshkovitz Y. Pulmonary ede-
ACTUALIZACIÓN E INVESTIGACIÓN ma, new insights on pathogenesiss and treatment.
Curr Opin Cardiol 2002; 9:139-143.
Los nuevos desarrollos en ventilación no in- 3. Cotter G. Randomised trial of high-dose isosorbide
vasora y el desarrollo e introducción de los dinitrate plus low-dose furosemide versus high-
nuevos inotrópicos con acción vasodilatadora dose furosemide plus low-dose isosorbide
deben motivar la actualización de esta guía, dinitratee in severe pulmonary edema. Lancet
lo mismo que todos los desarrollos en el ma- 1998; 351:389-393.
4. Gandhi SK. The pathogenesis of acute pulmonary
nejo de las causas desencadenantes del ede-
edema associated with hypertension. N Engl J Med
ma pulmonar, especialmente la enfermedad 2001; 344:17-22.
coronaria y la hipertensión. 5. Haupt MT. Cardiogenic pulmonary edema, an
inflammatory disorder? Crit Care Med 2003;
31:1282-1283.
6. L’Her E. Noninvasive mechanical ventilation in
acute cardiogenic pulmonary edema. Curr Opin
Crit Care 2003; 9:67-71.
7. Matthay MA, Folkesson HG, Clerici C.Lung
epithelial fluid transport and the resolution of
pulmonary edema. Physiol Rev 2002; 82:569-600.
8. Sacetti A. Effect of ED management on ICU use
in acute pulmonary edema. Am J Emerg Med 1999;
6:571-574.

580
CAPÍTULO XXV: EDEMA PULMONAR DE LAS ALTURAS

CAPÍTULO XXV

Edema pulmonar de las alturas

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades
(Escuelas) de Medicina
Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l edema pulmonar de las alturas es una


de las llamadas Enfermedades de la Al-
tura, que incluyen también la enfermad de la
• Uso de medicamentos para dormir.
• Historia previa de edema pulmonar de las
alturas.
montaña y el edema cerebral de las alturas. • Ejercicio pesado.
Es un tipo de edema pulmonar agudo no car- • Residir en una altura menor de 900 metros
diogénico de causa desconocida. sobre el nivel del mar.

Los niños son más susceptibles que los adul-


EPIDEMIOLOGÍA tos, y también los hombres en comparación
con las mujeres.
En los Estados Unidos más de 40 millones de
personas viajan a sitios con una altitud mayor
de 1500 metros sobre el nivel del mar. Estas FISIOPATOLOGÍA
personas tienen un riesgo mayor de sufrir las
consecuencias de la hipoxia y la hipotermia. La adaptación a la altura se hace a través de
Durante la temporada invernal de 1991, en el cambios en la función pulmonar y renal. El vo-
estado de Colorado la incidencia de edema lumen corriente se aumenta, lo que produce
pulmonar de las alturas fue de 22% a altitudes alcalosis respiratoria y secreción de bicarbona-
mayores de 3.000 m (Hackett & Roach 2001). to por el riñón como mecanismo compensador.
En nuestro país no se conoce la incidencia de Se disminuye la tolerancia al ejercicio y se pre-
esta enfermedad, pero en el Hospital Univer- sentan alteraciones del sueño. En la medida
sitario de la Fundación Santa Fe de Bogotá que se asciende en altura, los quimiorrecep-
(2.640 m de altitud) se ha observado en per- tores centrales cambian su punto umbral de
sonas que llegan del nivel del mar. funcionamiento a niveles menores de presión
arterial de CO2. La adaptación se logra al per-
Se han identificado varios factores de riesgo para manecer cuatro a siete días en altura.
desarrollar edema pulmonar de las alturas:
No se conoce la causa exacta del edema pul-
• Ascenso rápido. monar de las alturas. La hipoxia induce res-
• Ingesta excesiva de sal. puestas neurohormonales y hemodinámicas

581
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

que aumentan la perfusión de los capilares de medicamentos. La droga de elección es la


pulmonares, lo que lleva a una presión hidros- nifedipina en dosis inicial de 10 mg, seguida
tática capilar mayor y, por lo tanto, a edema. de 30 mg cada 12 o 24 horas. Los agonistas
ß2, como el salbutamol, también han probado
su utilidad.
CUADRO CLÍNICO
Si se cuenta con una cámara hiperbárica por-
El edema pulmonar de las alturas ocurre dos tátil, una presión de 2 psi (13 Kpa) es equiva-
a cuatro días después de iniciar el ascenso. lente a realizar un descenso de 2.000 metros.
La mayoría de los casos ocurre durante la se-
gunda noche de travesía. El uso de furosemida es controvertido.

Los síntomas incluyen disnea en reposo, tos


seca y esputo rojizo claro y dificultad respirato- COMPLICACIONES
ria en las formas avanzadas de la enfermedad.
La complicación más grave del edema pulmo-
En el examen físico se encuentran estertores nar de las alturas es la aparición de edema
que se localizan en forma inicial por debajo cerebral. El desarrollo de cambios en el esta-
de la axila derecha y se diseminan luego a los do de conciencia y ataxia son indicadores cla-
dos campos pulmonares. La presencia de fie- ros de la enfermedad. En el examen físico pue-
bre (temperatura mayor a 38,3°C) es común. den encontrarse papiledema y hemorragias
Síntomas neurológicos como cefalea y mareo retinianas. Cuando el paciente entra en coma,
ocurren en 50% de los casos; 14% desarrollan la tasa de mortalidad es superior a 60%.
edema cerebral de las alturas.
El manejo es similar al de los pacientes que
tienen edema pulmonar de las alturas, con
AYUDAS DIAGNÓSTICAS descenso rápido y utilización de oxígeno su-
plementario.
Los gases arteriales muestran alcalosis res-
piratoria e hipoxemia. En la radiografía de tó- Los esteroides han demostrado ser beneficio-
rax aparecen infiltrados alveolares disemina- sos. El medicamento más estudiado es la
dos con ingurgitación de los vasos pulmona- dexametasona en dosis de 8 mg IM en forma
res. Pero en esencia el diagnóstico es clínico, inmediata, y se continúa con 4 mg cuatro ve-
por lo cual el manejo debe iniciarse tan pron- ces al día hasta la recuperación del paciente.
to se detecten los primeros síntomas.

PRONÓSTICO
TRATAMIENTO
El pronóstico de la enfermedad es excelente
La prioridad en el tratamiento del edema pul- si se trata a tiempo, con recuperación com-
monar de las alturas es el descenso rápido pleta de la función pulmonar. Los pacientes
del paciente y la utilización de oxígeno suple- pueden ser dados de alta una vez se logre
mentario. Cuando no es posible llevar al pa- una saturación de hemoglobina mayor de 90%
ciente a una altura menor, está indicado el uso sin oxígeno suplementario.

582
CAPÍTULO XXV: EDEMA PULMONAR DE LAS ALTURAS

PREVENCIÓN recreational climbers: a prospective study. Lancet


2002; 359:303-309.
Es conveniente advertir a los individuos que 3. Duplain H, Sartori C, Lepori M, et al. Exhaled nitric
oxide in high-altitude pulmonary edema: role in the
han tenido un episodio de edema pulmonar de
regulation of pulmonary vascular tone and
las alturas, que de nuevo pueden desarrollar evidence for a role against inflammation. Am J
la enfermedad: 60% padecen el cuadro al as- Respir Crit Care Med 2000; 162:221-224.
cender a una altitud mayor de la que residen. 4. Duplain H, Vollenweider L, Delabays A, et al.
En estos casos está indicada la utilización profi- Augmented sympathetic activation during short-
láctica de nifedipina oral en dosis de 20- 30 mg term hypoxia and high-altitude exposure in
cada 12 horas mientras se hace el ascenso. subjects susceptible to high-altitude pulmonary
edema. Circulation 1999; 99:1713-1718.
5. Grunig E, Mereles D, Hildebrandt W, et al. Stress
En los individuos que sufren edema pulmonar
Doppler echocardiography for identification of
a alturas menores de 2.500 metros o en aque- susceptibility to high altitude pulmonary edema. J
llos con dos o más episodios, está justificada Am Coll Cardiol 2000; 35:980-987.
la realización de estudios para evaluar la pre- 6. Hackett PH, Roach RC. High altitude illness. N
sencia de shunts intracardíacos o intra Engl J Med 2001; 345:107-114.
pulmonares. 7. Horticorena EA. Entidades nosológicas de desadap-
tación aguda a altura. An Fac Med 1997; 58:85-91.
8. Niedebacher J, Rueda A, Sanabria B. Edema
LECTURAS RECOMENDADAS pulmonar de las alturas. Rev Colomb Neumol
1998; 10: 123-6.
1. Bush T, Bartsch P, Pappert D, et al. Hypoxia 9. Sartori C, Vollenweider L, Loffler BM, et al.
decreases exhaled nitric oxide in mountaineers Exaggerated endothelin release in high-altitude
susceptible to high-altitude pulmonary edema. Am pulmonary edema. Circulation 1999; 99:2665-2668.
J Respir Crit Care Med 2001; 163:368-373. 10. Wipfler JE. High altitude emergencies. En:
2. Cremona G, Asnaghi R, Baderna P, et al. Emergency Medicin e. Editado por SH Plantz, JN
Pulmonary extravascular fluid accumulation in Adler. Williams & Wilkins. Baltimore, 1998.

583
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXVI

Hemoptisis

Sonia Lucía Bravo Camacho, MD


Departamento de Urgencias, Hospital Universitario Clínica San Rafael
Bogotá

DEFINICIÓN

H emoptisis (del griego haima que significa


sangre y ptysis, expectorar) es la expec-
toración con sangre, específicamente origina-
inespecífico que requiere atención médica in-
mediata.

da en el tracto respiratorio por debajo de la


glotis. FISIOPATOLOGÍA
La mayoría de las hemoptisis se originan en
CLASIFICACIÓN las arterias bronquiales (90%) y tienden a ser
más significativas por la presión sistémica de
La hemoptisis se clasifica según la cuantía del las mismas. Un 5% se origina en las arterias
sangrado, pero en la práctica clínica se habla pulmonares. El mecanismo del sangrado es
de hemoptisis amenazante, refiriéndose a la inflamación de la mucosa hipervasculariza-
aquella que pone en riesgo la vida del pacien- da y la dilatación vascular como respuesta a
te; este concepto no sólo tiene en cuenta el sustancias liberadas en el proceso inflamato-
volumen y la velocidad del sangrado sino, ade- rio. La proliferación vascular de la mucosa en
más, el estado respiratorio basal del paciente el adenoma bronquial y la invasión de la arte-
y por ende su repercusión clínica. “La hemop- ria pulmonar en el caso de neoplasia pulmonar
tisis amenazante cumple alguno de los crite- o metastásica junto con los procesos necróti-
rios siguientes: sangrado superior a 20-30 mL/ cos frecuentes en las masas de crecimiento
hora o superior a 600 mL/24 horas, insuficien- rápido. En la tuberculosis la erosión de los
cia respiratoria o inestabilidad hemodinámica”. vasos sanguíneos por la destrucción paren-
quimatosa origina el sangrado.
La clasificación más usada de acuerdo al vo-
lumen de la hemoptisis es:
CAUSAS
Leve: menos de 30 mL/24 horas
Moderada: de 30 a 200 mL/24 horas Las causas son múltiples y su frecuencia va-
Severa: de 200 a 500 mL/24 horas ría según factores demográficos y la muestra
Masiva: mayor de 600 mL/día o una rata de poblacional. La tuberculosis pulmonar (TBC),
150 mL/hora. especialmente cavitaria, y las neumonías ne-
crotizantes por organismos del tipo Klebsiella
Independiente del volumen, que resulta difícil continúan siendo la principal causa de hemop-
de cuantificar, la hemoptisis es un síntoma tisis, dada su prevalencia en los países del

584
CAPÍTULO XXVI: HEMOPTISIS

tercer mundo. En los países industrializados Yatrogénicas:


las causas más comunes son la bronquitis, Biopsias endoscópicas.
las bronquiectasias y los carcinomas bronco- Punciones transtorácicas.
génicos. En aproximadamente 15%-30% de Catéter de Swanz-Ganz.
los casos la principal causa de hemoptisis no
puede ser establecida, y se hace referencia Traumáticas:
entonces a hemoptisis criptogénica o idiopáti- Trauma penetrante.
ca. En los niños la causa más frecuente de Trauma cerrado: contusión pulmonar.
hemoptisis la constituyen los cuerpos Cuerpo extraño.
extraños.
Hemorragias alveolares y Vasculitis:
Enfermedad de Goodpasture.
HEMOPTISIS. CAUSAS Enfermedad autoinmune: LES, AR, esclero-
derma.
Infecciosas-Inflamatorias: Hemosiderosis pulmonar.
Bronquitis aguda y crónica; bronquiectasias. Diátesis hemorrágicas.
Neumonía: estafilocóccica necrotizante, Granulomatosis de Wegener.
Klebsiella, Síndrome de Behcet.
Virales: citomegalovirus, herpes simple. Crioglobulinemias mixtas.
Tuberculosis. Síndrome de Heiner (asociada con alergia a
Micóticas: aspergilosis, aspergilomas. la leche).
Absceso pulmonar. Púrpura de Henoch-Schönlein.
Parásitos: quiste hidatídico, paragonimiasis.
Fármacos y Tóxicos:
Penicilamina, isocianatos, cocaína, propilthiu-
Neoplásicas: racilo, tirofiban,
Carcinoma broncogénico. Abciximab, fenitoína.
Metástasis pulmonares endobranquiales: ri-
ñón, seno, colon y por contigüidad: esófago. Otros desórdenes:
Adenoma bronquial. Limphangioleiomiomatosis o esclerosis tube-
Sarcoma de Kaposi. rosa.
Sarcoidosis.
Cardiovasculares: Fibrosis pulmonar idiopática, Síndrome
Infarto pulmonar. antifosfolípido.
Estenosis mitral.
Insuficiencia cardiaca.
Cardiopatías congénitas. DIAGNÓSTICO
Malformaciones arteriovenosas.
Aneurisma aórtico. Anamnesis: en primer lugar se debe confir-
mar la hemoptisis. Los siguientes parámetros
facilitan el diagnóstico diferencial entre hemop-
tisis y hematemesis:

585
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

HEMOPTISIS HEMATEMESIS
Aspecto del esputo Sangre roja y espumosa Sangre negruzca (“cuncho de café”)
Maniobra desencadenante Tos y disnea Náuseas, vómito
pH del esputo Alcalino Ácido
Contenido del esputo Mezcla con macrófagos y neutrófilos. Restos alimentarios
Antecedentes Enfermedad respiratoria Enfermedad digestiva o hepática severa.
Anemia aguda Ocasional Frecuente

Desde el punto de vista respiratorio debe reco- • Expectoración rosada, espumosa: edema
ger esencialmente los antecedentes de enfer- pulmonar.
medad respiratoria, datos epidemiológicos de
TBC, antecedente de traumatismo torácico, Confirmada la hemoptisis debe evaluarse la
posibilidad de aspiración de cuerpos extraños, gravedad.
antecedentes de hemoptisis, y en detalle las
características del episodio actual: volumen Exploración física: un examen físico minucio-
total del sangrado en un tiempo determinado, so comprende la valoración inicial y rápida del
velocidad de este sangrado, tiempo de evolu- estado hemodinámico y el compromiso respi-
ción, sintomatología respiratoria acompañan- ratorio, y debe aportar indicios importantes pa-
te. Se debe además investigar antecedentes ra el diagnóstico etiológico. Siempre se debe
de tabaquismo, enfermedades sistémicas que efectuar un examen de la cavidad oral, del
afecten pulmón y toma de anticoagulantes. Se área otorrinolaringológica y de piel buscando
requiere una evaluación amplia en pacientes la existencia de chapetas malares, telangiec-
fumadores para descartar existencia de neo- tasias, púrpura; exploración de los ruidos car-
plasias pulmonares diacos para hallar signos de insuficiencia
cardiaca o valvulopatía mitral; auscultación
Los datos clínicos permitirán sospechar las respiratoria.
enfermedades origen de la hemoptisis:
Ayudas diagnósticas: la radiografía de tó-
• Expectoración crónica abundante, hipocra- rax (proyección posteroanterior y lateral) en
tismo digital: descartar bronquiectasias o todos los pacientes con hemoptisis, ayuda a
neoplasias pulmonares. determinar la lesión origen del sangrado y
• Fiebre acompañando esputo manchado aporta indicios de diagnóstico.
con sangre: neumonía.
• Dolor torácico pleurítico y disnea: trombo- Estudios de laboratorio y otros:
embolismo pulmonar. • Hemograma.
• Chapetas malares: estenosis mitral. • Pruebas de coagulación.
• Telangiectasias en la mucosa oral: trastor- • Estudio básico de orina y perfil renal.
nos hereditarios de sangrado. • Frotis de esputo coloreado con Gram.
• Expectoración de sangre sin pus: TBC, cán- • Baciloscopia y cultivo para micobacterias.
cer o infarto pulmonar. • Gasimetría arterial (para determinar el es-
• Hemoptisis de olor nauseabundo: absce- tado de la función respiratoria).
so pulmonar o infección. • Electrocardiograma.

586
CAPÍTULO XXVI: HEMOPTISIS

Fibrobroncoscopia: es un procedimiento de a. Manejo Prehospitalario: básicamente se


diagnóstico invaluable. Permite la visualiza- tiene en cuenta la protección de la vía aérea
ción directa del árbol traqueobronquial hasta y la estabilidad hemodinámica.
la 4ª ó 5ª generación bronquial. Permite la ob- • Se transporta el paciente en decúbito late-
tención de muestras de zonas sospechosas y ral sobre el lado que se presume afectado.
de zonas dístales no visualizadas para estu- • Se canaliza vena (Yelco No.16 ó No.18).
dio microbiológico y citológico. Se convierte • Oxígeno suplementario por cánula o
además en un instrumento terapéutico. Venturi.
• Monitoría permanente de la saturación de
La broncoscopia rígida se usa en hemoptisis oxígeno.
masivas por su facilidad para succionar y man- • Intubación orotraqueal en caso de desatu-
tener permeable la vía aérea. Se puede hacer ración que no mejore con las medidas an-
con anestesia general o local con sedación. teriores. Recordar que 400 mL de sangre
en la vía aérea interfieren en forma signifi-
OTROS PROCEDIMIENTOS cativa con el intercambio gaseoso.
COMPLEMENTARIOS: • Traslado del paciente a un hospital de 3º o
4º nivel .
La Tomografía Axial Computarizada (TAC)
no es un procedimiento de rutina, pero es de b. Atención Hospitalaria: en las hemoptisis
gran utilidad cuando la ubicación topográfica leves en un paciente en buen estado gene-
del sangrado no se ha establecido por otros ral y sin signos de infección o de trombo-
métodos. Es la prueba de elección cuando hay embolismo, con radiografía de tórax nor-
sospecha de bronquiectasias como enferme- mal, se puede diferir el estudio a consulta
dad causal (pacientes menores de 40 años externa prioritaria con el neumólogo (me-
sin riesgo de cáncer). Agregando medio de nos de una semana). En los demás casos
contraste se pueden detectar aneurismas y de hemoptisis leve y moderada, aparte del
malformaciones arteriovenosas. tratamiento etiológico correspondiente, se
aplica una serie de medidas generales:
La Angiografía Pulmonar es una técnica que • Oxigenoterapia.
se usa algunas veces para diagnosticar he- • Vía venosa permeable.
moptisis de origen vascular (obstrucción o • Reposo en cama en decúbito lateral sobre
anormalidades venosas). el lado afectado (si se sabe, o se sospe-
cha).
La Gamagrafía de Ventilación Perfusión • Codeína o inhibidores de la tos, si ésta exa-
está indicada cuando se sospecha trombo- cerba la hemoptisis, cuidando de no inhibir
embolismo pulmonar. el reflejo completamente. No se deben usar
sedantes fuertes.
• Ayuno.
TRATAMIENTO • Protección gástrica.
• Seguimiento clínico estricto.
El tratamiento de la hemoptisis se prescribe • Exámenes de laboratorio y radiografías de
en función a sus causas, de la severidad de tórax.
la hemorragia y del estado general del • Reserva de sangre.
paciente. • Considerar remisión a hospital de 3º ó 4º
nivel.

587
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

c. Manejo de la hemoptisis masiva c. Irrigación del área sangrante con solu-


• Se ejecutan las normas del ABC de la re- ción de adrenalina que puede causar
animación. vasoconstricción y cesación del sangrado
• Vía aérea permeable y monitoría de la sa- d. Instilación de drogas antifúngicas como
turación de oxígeno. Si ésta no es satisfac- anfotericina con o sin N-acetilcisteína o
toria, se debe intubar con un tubo normal yodo, directamente dentro de la cavidad a
No.8, en lo posible o un bilumen de Carlens. través de un catéter percutáneo o trans-
• Soporte hemodinámico con cristaloides, bronquial, que da un excelente control de
expansores de volumen y transfusión si es la hemoptisis. Esta técnica se debe consi-
necesario, manteniendo siempre dos vías derar especialmente en candidatos no ap-
venosa o una vía central. tos para tratamiento quirúrgico en el ma-
• Traslado a UCI para monitoría y manejo nejo de aspergiloma.
constante, ya que estos pacientes con al- e. Infusión de precursores de la fibrina,
guna coomorbilidad tienen una alta proba- como agente hemostático.
bilidad de muerte (más de un 80%). f. Fotocoagulación con láser.
• Como medidas generales, el paciente debe
ser colocado en decúbito lateral sobre el Cirugía: hasta hace dos décadas era el trata-
lado que esté o se sospeche esté afecta- miento de elección, una vez se identificaba el
do, para evitar la aspiración pulmonar sitio de sangrado por broncoscopia. Actual-
contralateral. mente sólo es una opción de tratamiento y los
• Drogas supresoras de la tos pueden ser criterios de elegibilidad difieren entre las insti-
agregadas, teniendo en cuenta el riesgo de tuciones. La cirugía es el tratamiento de elec-
la retención de sangre en los pulmones, ción en:
con la consecuente alteración del intercam- • Hemoptisis masiva causada por ruptura de
bio gaseoso. aneurisma de la aorta.
• Interconsulta con neumología para evalua- • Quiste hidatídico.
ción y realización de fibrobroncoscopia. • Ruptura pulmonar iatrogénica.
• Injuria vascular en el trauma de tórax.
Ninguna terapia invasora está indicada en • Adenoma bronquial.
el manejo de la hemoptisis causada por • Lesiones micóticas resistentes a otras te-
terapia de anticoagulación, discrasias san- rapias.
guíneas, o síndrome de Goodpasture. Es-
tos pacientes deben recibir terapia médica La cirugía está formalmente contraindicada en
específica y adecuada. pacientes con cáncer de pulmón invadiendo
tráquea, mediastino, corazón, grandes vasos,
Fibrobroncoscopia. Es el método diagnósti- o pleura parietal y en la fibrosis pulmonar avan-
co y terapéutico de emergencia y se puede zada.
realizar a la cabecera del paciente. Con este
procedimiento se logra: Embolización de la arteria bronquial: es uno
a. Taponamiento endobronquial para san- de los métodos de tratamiento más efectivos
grado masivo, utilizando catéter de Fogarty no quirúrgicos en la hemoptisis masiva. Pue-
o una sonda de Foley. de presentar una seria complicación por
b. Inserción de un catéter bilumen (Carlens embolización accidental de la arteria espinal
o Robertshaw) para proteger el pulmón no (<1% de los casos) cuando ésta es rama de
sangrante del proceso de aspiración. la arteria bronquial.

588
CAPÍTULO XXVI: HEMOPTISIS

PRONÓSTICO • Medidas antiembólicas en el paciente en


reposo con factores de riesgo para trombo-
El pronóstico de las hemoptisis leves y mode- embolismo.
radas depende de: • Exigir el cumplimiento de las medidas de
salud ocupacional para los trabajadores
• La etiología. con exposición a asbesto, cemento, sílice,
• Las condiciones básicas de salud del pa- carbón y los del área de la salud.
ciente.
• Las enfermedades concurrentes.
• La remisión oportuna a un nivel de aten- LECTURAS RECOMENDADAS
ción adecuado.
1. Jean-Baptiste, H. Clinical assessment and
La mortalidad en casos de hemoptisis masiva management of masive hemoptysis. Crit Care
es superior al 80%. Med. 2000; 28(5):1642-47.
2. Case No.36, Case Records of the Massachusetts
General Hospital. N Engl J Med. 2002; 347
(21):1696-1701.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN 3. B Hirshberg, I Biran, M Glazer, and MR Kramer.
Hemoptysis: etiology, evaluation, and outcome in a
• Promover dentro de la población general tertiary referral hospital. Chest 1997;112:440-444.
la consulta inmediata una vez se presente 4. Haponik E, Fein A, Chain R. Managing life-
el síntoma. threatening hemoptysis, has anything really
• Vacunación preventiva a la población en changed?. Chest 2000; 118:1431-1435.
5. Prieto LM. Hemoptisis. Trib Medica 1994;89:87-8.
riesgo.
• Estudio de contactos y aislamiento respi- INTERNET
ratorio del paciente bacilífero. 1. Balcells Vilarnau, Eva. Manejo de la hemoptisis
• Campañas contra el uso del cigarrillo como en atención primaria. www.cap-semfyc.com
principal factor en el desarrollo de cáncer 2. Pulmonology channel, Hemoptysis.
de pulmón y EPOC. www.healthcommunities.com.

589
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

590
CAPÍTULO XXVII: NEUMOTÓRAX

CAPÍTULO XXVII

Neumotórax

Fidel Camacho Durán MD, FACS


Profesor de Cirugía y Director del Programa de Postgrado de Cirugía de Tórax,
Universidad El Bosque.
Jefe de la Sección de Cirugía de Tórax,
Fundación Santa Fe de Bogotá

Román José Zamarriego Puentes, MD


Cirujano de Tórax, Universidad El Bosque

E l neumotórax es motivo frecuente de con-


sulta en los servicios de urgencias, y su
adecuado manejo depende de una buena
la semiología (sucusión hipocrática) y sugirie-
ron maniobras terapéuticas.

comprensión de su fisiopatología. Un neumo- En el siglo XVI, Andreas Vesalius se percató


tórax debe ser reconocido de inmediato por de la necesidad de insuflación de aire orotra-
el personal de urgencias, porque puede dar queal con presión positiva para conservar la
lugar a un neumotórax a tensión que puede expansión pulmonar una vez abierta la pleura.
ser rápidamente fatal. Boerhaave en 1724 definió la relación entre
la anatomía pleural y la presentación clínica.
Meckel describió en 1759 los hallazgos post-
DEFINICIÓN Y RESEÑA HISTÓRICA mortem del neumotórax a tensión y en 1803
Etard, discípulo de Laennec, acuñó el térmi-
El neumotórax se define como la presencia no “neumotórax”. En 1819, con el desarrollo
de aire libre en el espacio pleural, con el con- del fonendoscopio por Laennec, se logró
secuente colapso del parénquima pulmonar. correlacionar los síntomas con los signos en
Este aire puede provenir de diversas fuentes: pacientes que padecían neumotórax.

• Ruptura de la pleura visceral. En el siglo XX se utilizó como maniobra tera-


• Comunicación del espacio pleural con la péutica el “neumotórax artificial”.
atmósfera.
• Lesión del árbol traqueobronquial. En las publicaciones de Kjaergaard de 1932
• Ruptura esofágica. se postuló como posible causa de neumotórax
• Bacterias que producen gas. en adultos jóvenes sanos la ruptura de ampo-
• Lesión de órganos intra abdominales. llas (blebs) apicales, sin que se conociera la
etiología de estas ampollas, pero se sugirió
Se conocen descripciones por Hipócrates y por vez primera la asociación del tabaquismo
Galeno de ciertos eventos clínicos que com- como factor de riesgo desencadenante.
prometen el espacio pleural, y ellos detallaron

591
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CLASIFICACIÓN oxígeno. La magnitud de estos cambios es


mayor si hay enfermedad pulmonar subyacen-
El neumotórax se clasifica según su causa te. En la medida que aumentan la cantidad de
desencadenante: aire en la cavidad pleural y el colapso pulmo-
nar, con el consecuente aumento de la pre-
a. Neumotórax espontáneo: sión intrapleural, se genera desviación del
• Primario. mediastino, colapso de venas cavas, dismi-
• Secundario. nución del retorno venoso al corazón, dismi-
• Neonatal. nución del gasto cardiaco y si todo ello no es
b. Neumotórax adquirido: advertido rápidamente por el personal médico,
• Traumático. causa paro cardiaco y la muerte del paciente.
• Iatrogénico.
• Catamenial. Cuando el aire entra y sale de la cavidad pleu-
ral por una herida soplante en la pared del
tórax, se producen movimientos de vaivén del
CAMBIOS FISIOLÓGICOS mediastino que ocasionan también alteracio-
EN EL NEUMOTÓRAX nes en el retorno venoso y repercusión sobre
el gasto cardiaco.
En las personas normales, la presión en el
espacio pleural es negativa con respecto a las
presiones alveolar y atmosférica durante todo NEUMOTÓRAX ESPONTÁNEO
el ciclo respiratorio. Esta presión negativa se PRIMARIO
genera por enfrentamiento de dos fuerzas:
una, el retroceso elástico del pulmón que tien- EPIDEMIOLOGÍA
de a colapsarlo y la otra, la expansión de la
caja torácica. En la medida en que la caja torá- El Neumotórax Espontáneo Primario (NEP)
cica se hace más grande en la fase inspira- tiene una incidencia estimada entre 7,4 y 18
toria, también la presión negativa se hace más casos por 100.000 habitantes/año para el gé-
alta. Esta presión negativa contribuye a man- nero masculino y entre 1,2 y 6 casos por
tener abiertos los alvéolos, y estarán mas 100.000 habitantes/año para el femenino.
abiertos en la medida en que esa presión ne-
gativa sea mayor (inspiración profunda). La edad de presentación está por lo general
entre los 10 y los 30 años, con muy poca fre-
Cuando se produce una comunicación entre cuencia por encima de los 40 años.
el espacio alveolar y el pleural o entre el espa-
cio pleural y la atmósfera, el aire fluye hacia Como sucede con el cáncer pulmonar, se ha
la cavidad de menor presión (cavidad pleural). logrado identificar al consumo de tabaco como
factor de riesgo para el NEP en relación di-
Las principales consecuencias fisiológicas recta con la intensidad del hábito.
derivadas del neumotórax son el cambio en
la presión negativa de la cavidad pleural, que El NEP se presenta mas frecuentemente en
lleva al colapso del pulmón y al descenso en el pulmón derecho, por razones desconoci-
la capacidad vital y en la PaO 2 arterial con das y en 10% de los casos su compromiso es
incremento en la diferencia alveolo-arterial de bilateral.

592
CAPÍTULO XXVII: NEUMOTÓRAX

FISIOPATOLOGÍA aparece dolor pleurítico ipsilateral con o sin


disnea, según el grado de colapso pulmonar.
Aunque los pacientes con NEP no exhiben Los síntomas disminuyen de manera impor-
enfermedad pulmonar clínicamente aparente, tante en las primeras 24 horas a pesar de la
la presencia de ampollas (blebs) subpleurales persistencia del neumotórax.
(colecciones <2 cm de aire localizadas en la
pleura visceral) se confirma en 76% de los que En el examen físico la taquicardia es el hallaz-
son sometidos a cirugía video-asistida y en go más común y según el tamaño del colapso
89% de los que son llevados tomografía axial pulmonar, se hace evidente la disminución de
computadorizada (TAC) de pulmón como parte la movilidad de la pared torácica, hay hiperre-
del proceso diagnóstico. sonancia a la percusión, frémito disminuido y
disminución o ausencia de los ruidos respira-
Los pacientres con neumotórax espontáneo torios en el hemitórax comprometido. La pre-
primario suelen ser personas altas y delgadas, sencia de taquicardia, hipotensión y cianosis
con aumento del diámetro vertical del tórax y debe hacer pensar en neumotórax a tensión.
disminución del diámetro anteroposterior
(longilíneos); se presenta más en hombres
que en mujeres, entre los 10 y los 30 años, DIAGNÓSTICO
con frecuencia en miembros de una misma
familia y más en fumadores. El diagnóstico lo sugieren la historia clínica,
los hallazgos en el examen físico y se confir-
El mecanismo de formación de las ampollas ma por la detección mediante radiografía del
subpleurales, parece ser degradación de las tórax en proyección PA: aparece una línea que
fibras elásticas del pulmón inducida por la señala la presencia de aire intrapleural y el
acumulación de neutrofilos y macrófagos des- consecuente desplazamiento de la pleura
encadenada por el hábito de fumar. Esta de- visceral por el colapso pulmonar. Maniobras
gradación genera alteración del balance en- de espiración durante la toma de la radiogra-
tre los sistemas proteasa-antiproteasa y oxi- fía ayudan en la identificación de un neumo-
dante –antioxidante. Se produce también obs- tórax pequeño.
trucción por la inflamación de las vías aéreas
de pequeño calibre, lo que aumenta la pre- La TAC de tórax no es necesaria en la mayo-
sión intraalveolar y resulta en fugas de aire al ría de los casos, salvo si hay duda en el diag-
intersticio pulmonar; el aire se desplaza hacia nóstico, porque logra identificar pequeños
el hilio, ocasionando neumomediastino con neumotórax y detectar las ampollas en un
aumento progresivo de la presión en el com- porcentaje alto de estos pacientes.
partimiento mediastinal hasta producir
ruptura de la pleura mediastinal y el aire logra Cerca de 15% de los pacientes presentan
alcanzar el espacio pleural y se manifiesta derrame pleural con celularidad de predomi-
como neumotórax. nio eosinofílico.

Los hallazgos electrocardiográficos no son


PRESENTACIÓN CLÍNICA específicos, pero se puede evidenciar taqui-
cardia sinusal, desviación del eje a la derecha,
La mayoría de los episodios de NEP ocurren disminución del voltaje y de la amplitud del
cuando la persona se encuentra en reposo; complejo QRS, e inversión de la onda T.

593
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO En el grupo de pacientes que presenta esca-


pe aéreo persistente a través de la trampa de
Los pilares en los que se fundamenta el trata- agua con pulmón expandido, se recomienda
miento del NEP son los siguientes: observación por cuatro a siete días hasta el
a. Drenaje del aire anormal del espacio cierre espontáneo, el cual ocurre en 80% de
pleural. los casos. Si hay persistencia del escape o
b. Reexpansión pulmonar. aumento del problema con maniobras de
c. Evitar o disminuir la recurrencia. Valsalva mínimas, como el susurro, se debe
llevar el paciente a cirugía y someterlo a los
Paciente estable con neumotórax peque- procedimientos enunciados atrás.
ño (<15%): los pacientes en este grupo de-
ben ser observados por no más de 6 horas, al El primer episodio del neumotórax espontá-
cabo de las cuales se repite la radiografía del neo primario se debe tratar si es pequeño con
tórax, y si permanece asintomático y no hay observación y si es mayor del 15%, con
cambios radiológicos se da salida con indica- drenaje.
ciones sobre los síntomas y signos de alarma
(aumento del dolor y de la fatiga). En caso de Los neumotórax primarios recurren. La tasa
aumentar el neumotórax se debe colocar dre- de recurrencia es de 40-60% después del pri-
naje pleural. mer episodio. Esta recurrencia se presenta
entre los tres primeros meses y los dos años
Paciente estable o inestable con neumo- en 30% de los casos. Después del segundo
tórax grande (>15%): en este grupo de pa- neumotórax, la tasa de recurrencia en forma
cientes, independientemente de su sintomato- de un tercer episodio se aumenta hasta 70%.
logía, se debe instaurar un sistema de drena- Cuando el neumotórax recurre después del
je pleural (catéter de drenaje, tubo de tórax primer episodio se debe tomar una conducta
conectado a trampa de agua), vigilar la expan- más definitiva como la videotoracoscopia con
sión pulmonar y la persistencia de escapes resección de ampollas y escarificación de la
aéreos, situaciones que obligarían a proponer pleura.
la utilización de succión a presiones bajas ini-
cialmente (10 cm H2O), aunque esto último
es muy discutido actualmente en la literatura NEUMOTÓRAX ESPONTÁNEO
y no es claro un real beneficio de la succión SECUNDARIO
en cuanto al cierre de los escapes aéreos ó
disminución de la estancia hospitalaria. A diferencia del NEP, el Neumotórax Espon-
táneo Secundario (NES) es una condición
En la mayor parte de los pacientes se resuel- potencialmente letal, debido a la asociación
ve el problema con el drenaje. Cuando per- de patología parenquimatosa pulmonar difu-
siste el colapso pulmonar a pesar de succión sa, con reserva cardiopulmonar límite.
intrapleural, se debe realizar fibrobroncos-
copia para descartar obstrucción bronquial
que explique el colapso, y en caso de descar- EPIDEMIOLOGÍA
tarla se debe realizar exploración quirúrgica,
ojalá videotoracoscópica, o toracotomia para La incidencia para los hombres es de 6,3 ca-
la resección de ampollas, con pleurodesis por sos por 100.000 habitantes/año y para las
abrasión pleural, o pleurectomía parietal. mujeres de 2 casos por 100.000 habitantes/

594
CAPÍTULO XXVII: NEUMOTÓRAX

año; aumenta a 26 casos por 100.000 habi- PRESENTACIÓN CLÍNICA


tantes/año cuando se asocia con enfermedad
pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Su pico Hay ciertas diferencias con el NEP: la disnea,
de presentación ocurre en la quinta o sexta por ejemplo, siempre está presente y por lo
décadas de la vida. general es más severa en el NES, lo que se
explica por el compromiso pulmonar subya-
cente.
ETIOLOGÍA
Entre los otros síntomas están dolor pleurítico
Su presentación ha sido explicada por múlti- ipsilateral, hipotensión, hipoxemia e hiper-
ples anomalías que comprometen de manera capnia.
difusa el parénquima pulmonar; la enferme-
dad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es
la más frecuente; se desencadena específi- DIAGNÓSTICO
camente por obstrucción bronquial inicial que
genera un fenómeno de válvula, favorece el Se realiza como se describió para el NEP, te-
atrapamiento de aire con la consecuente ge- niendo precaución al interpretar la radiografía
neración de espacios aéreos y luego destruc- del tórax, porque se puede confundir un neu-
ción de la pared alveolar, lo que da origen a motórax espontáneo con una gran bula de
las bulas y éstas, a medida que incrementan paredes delgadas que ocupe parte de un
en tamaño y en número o se desarrollan en la hemitórax; la TAC del tórax adquiere más im-
periferia, pueden romperse y ocasionar el portancia que en el NEP en el proceso enfo-
neumotórax. que diagnóstico.

En las ultimas décadas ha tomado importan-


cia la infección pulmonar por Pneumocystis TRATAMIENTO
carinii, derivada de la pandemia global por el
virus de inmunodeficiencia adquirida (VIH) y Paciente estable con neumotórax peque-
en 5% de los casos de NES está asociado al ño (<15%): los pacientes deben ser maneja-
uso de pentamidina inhalada que se usa en dos en un ambiente hospitalario, sometidos a
su tratamiento; probablemente se explica por observación, administración de oxígeno y co-
la necrosis periférica generada por acción de locación de un sistema de drenaje pleural se-
este medicamento, lo que favorecería esca- gún su compromiso respiratorio.
pes aéreos hacia el espacio pleural y neumo-
tórax. Paciente estable o inestable con gran
neumotórax (> 15%): de igual manera deben
También están relacionadas con esta entidad ser hospitalizados y conectados a un sistema
el asma, fibrosis quística, fibrosis pulmonar, de drenaje pleural.
sarcoidosis, tuberculosis, infecciones bacteria-
nas, parasitarias, micoticas, neoplasias prima- Tras la instalación del sistema de drenaje pleu-
rias y metastásicas del pulmón, endometriosis, ral, se debe valorar en todos la persistencia
enfermedades del colágeno e histiocitosis X, del colapso pulmonar y la presencia de esca-
entre otras. pes aéreos, porque si estos problemas conti-
núan y el paciente puede tolerar un procedi-
miento quirúrgico, se le debe ofrecer interven-

595
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ción videotoracoscópica o abierta, además de El aire puede además alcanzar el espacio


pleurodesis; si no es candidato quirúrgico por pleural en politraumatismos toracoabdomi-
su comorbilidad, se debe ofrecer pleurodesis nales con lesión diafragmática o disección a
química antes de retirar el sistema de drenaje través del hiato esofágico, por la presión
pleural, con el fin de prevenir las recurrencias intrabdominal sumada a la presión negativa
que en estos pacientes son más frecuentes y intapleural.
pueden ser letales. Dadas su edad y su ex-
pectativa de vida limitada, se podría utilizar el En el neumotórax a tensión, se presenta un
talco para la pleurodesis. mecanismo de válvula unidireccional que se
abre durante la inspiración por la acción de
los músculos respiratorios y la presión nega-
NEUMOTÓRAX TRAUMÁTICO tiva intrapleural y se cierra durante la espira-
ción; hay acumulación progresiva de aire en
FISIOPATOLOGÍA la cavidad torácica que produce desviación
contralateral del cardiomediastino con obstruc-
El mecanismo de formación del neumotórax ción de los grandes vasos del tórax y deterio-
en el trauma penetrante es fácilmente com- ro del gasto cardiaco, todo lo cual significa ries-
prensible, pues la solución de continuidad en go de muerte.
la pared torácica, con lesión de la pleura parie-
tal, de la visceral y del parénquima pulmonar
subyacente permite la entrada de aire al es- PRESENTACIÓN CLÍNICA
pacio pleural.
Es muy diversa, y permite un amplio espectro
En el trauma cerrado del tórax, una fractura clínico, desde el paciente asintomático esta-
costal puede lesionar la pleura visceral y la- ble, hasta el paciente in extremis. Por ello se
cerar el parénquima, con el consecuente es- requiere destreza del equipo de paramédicos
cape aéreo. Cuando se presenta compresión y del personal médico del servicio de urgen-
brusca del tórax, con fuerzas de aceleración cias, para identificar este tipo de lesión que
y desaceleración, se produce incremento en en ocasiones puede cortar la vida del paciente.
la presión alveolar que puede ocasionar rup-
tura alveolar y paso de aire libre directamente Es importante tener en cuenta la valoración
hacia el espacio pleural o intersticial; ese aire inicial del paciente politraumatizado descrita
se desplaza hacia el hilio pulmonar, ocasiona en el ATLS (Advanced Trauma Life Support)
aumento de la presión mediastinal, favorece del Colegio Americano de Cirujanos, y de esa
la ruptura de la pleura mediastinal y alcanza manera ágil y sistemática determinar si el de-
el espacio pleural. terioro del paciente se explica por compromi-
so de la vía aérea, del sistema cardiorespira-
En el trauma por mecanismos de aceleración torio, circulatorio o neurológico, e iniciar rápi-
y desaceleración bruscas, se describen lesio- damente las maniobras necesarias para su
nes directas del árbol traqueobronquial, ge- recuperación.
neralmente localizados en un área alrededor
de los 2,5 cm de la carina, que se explica por La observación y otras maniobras simples
los sitios de fijación de la misma a las estruc- pueden ayudar en la detección de tales lesio-
turas viscerales mediastinales. nes: capacidad de hablar, cianosis, ingurgita-
ción yugular, patrón respiratorio, asimetría de

596
CAPÍTULO XXVII: NEUMOTÓRAX

los hemitórax, estigmas de trauma, lesiones a tensión en un neumotórax abierto; se com-


torácicas soplantes; en lo que respecta a la plementa con la administración de oxígeno.
palpación, el hallazgo de defectos en la pa- En situaciones extremas donde no es posible
red torácica, enfisema subcutáneo, y con la la realización de las dos medidas anteriores
auscultación la ausencia o disminución de los son necesarias medidas heroicas como la
ruidos respiratorios, cardiacos o la percepción toracostomía abierta mediante un tubo inter-
de ruidos intestinales dentro de un hemitórax, costal para de igual manera drenar el aire li-
son datos importantes para establecer el diag- bre en el hemitórax.
nóstico.
Por el contrario, en el paciente estable asinto-
mático con neumotórax pequeño y sin hemo-
DIAGNÓSTICO tórax asociado se recomienda la observación
clínica con control radiológico a las 6 horas, y
Está basado en la historia clínica y la valora- ante la ausencia de síntomas sin progresión
ción inicial. Si las condiciones del paciente lo del neumotórax se puede dar de alta indican-
permiten, se debe realizar radiografía del tó- do los signos de alarma para consultar nue-
rax en proyecciones PA y lateral Izquierda, vamente. Si el paciente presenta síntomas
para confirmar la sospecha clínica. Si la si- respiratorios al ingreso o durante ese periodo
tuación del paciente es critica, se deben rea- de observación, se detecta progresión del
lizar las maniobras de descompresión del es- colapso pulmonar o del hemotórax, se debe
pacio pleural antes de tomar de imágenes realizar toracostomía cerrada con drenaje a
diagnósticas. una trampa de agua o, mejor, con sistema de
succión, por el quinto espacio intercostal con
La TAC, con medio de contraste intravenoso, línea media axilar. Se usan sondas de tórax
está indicada cuando se sospechan lesiones de calibre 36 a 40 Fr. Si el neumotórax es
asociadas, especialmente de los grandes va- pequeño y el paciente va a ser llevado a ciru-
sos o del parénquima pulmonar. gía por otra causa o a ventilación mecánica,
debe drenarse con tubo de tórax.

TRATAMIENTO Como en los casos de neumotórax no traumá-


tico, se debe realizar control diario tanto clíni-
En los casos de inestabilidad y sospecha clí- co como del drenaje de aire por el tubo de
nica de neumotórax se debe realizar en el toracostomía, y seguir las recomendaciones
mismo sitio del accidente, una toracostomía descritas para el neumotórax espontáneo pri-
cerrada con drenaje a trampa de agua; si hay mario (NEP).
neumotórax a tensión y no se cuenta con los
implementos necesarios para realizar toracos- No se recomienda control radiológico diario,
tomía cerrada, se recomienda la punción con excepto en los casos de deterioro clínico y
aguja gruesa de tipo “Jelco” (Calibre 14 a 16 persistencia de escapes aéreos después de
Fr.) en el segundo espacio intercostal con lí- haber descartado fallas en el sistema de dre-
nea medio clavicular del lado afectado, para naje pleural.
facilitar la salida de aire del espacio pleural y
de manera temporal restituir las presiones Como medidas complementarias en el trata-
dentro de la cavidad torácica; en esta forma, miento, es importante la terapia respiratoria
dada la urgencia, se convierte un neumotórax con incentivo y adecuada analgesia que

597
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

permita al paciente realizar adecuado ciclo 6. Brasel KJ, Stafford RE, Weigelt JA, et al. Treatment
ventilatorio. of occult pneumothoraces from blunt trauma. J
Trauma 1999; 46:987-990.
7. Cerfolio RJ, Bass C, Katholi CR. Prospective ran-
En cuanto al momento de retirar el tubo, no domized trial compares suction versus water seal
hay diferencias estadísticamente significativas for air leaks. Ann Thorac Surg 2001; 71:1613-1617.
que demuestren la disminución en la inciden- 8. Fraser RS, Paré PD. Neumotórax. En: Fraser–
cia de neumotórax post-retiro del tubo al final Paré. Diagnóstico de las Enfermedades del Tó-
de la inspiración o en la espiración. rax. 4a edition. Editorial Médica Panamericana.
Bogotá, 2002.
9. Fry W, Paape K. Pneumothorax. En: Shields T.
General Thoracic Surgery. 5th ed. Lippincott
LECTURAS RECOMENDADAS Williams & Wilkins. Baltimore, 2000.
10. Ligth R. Pneumothorax. En: Pleural Diseases.
1. Ayed AK, Al- Din HJ. The results of thoracoscopic Editado por R Ligth. 4th edition. Lippincott Williams
surgery for primary spontaneous pneumothorax. & Wilkins. Philadelphia, 2002.
Chest 2000; 118:235-238. 11. Martino K, Merrit S, Boyakye K, et al. Prospective
2. Baumann MH, Starnge C, Heffner JE, Ligth R, randomized trial of thoracostomy removal
Kirby TJ, Klein J,Luketich JD, Panacek EA, Sahn algorithms. J Trauma 1999; 46:369-371.
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Consensus Statement. Chest 2001; 119:590-602. nal computed tomographic scans in trauma
3. Baumann MH, Strange C. Treatment of sponta- patients. J Trauma 2000; 49:281-285.
neous pneumothorax. A more aggressive 13. Paape K, Fry W. Spontaneous pneumothorax.
approach? Chest 1997; 112:789-804. Chest Surg Clin North Am 1994; 4:517-538.
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5. Bell RL, Ovadia P, Abdullah F, et al. Chest tube Tórax. Ediciones Médicas Zambon. Bogotá, 1992.
removal: end-inspiration or end-expiration? J Trau- 16. Weissberg D, Refaely Y. Pneumothorax: experience
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598
CAPÍTULO XXVIII: INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

CAPÍTULO XXVIII

Inhalación de gases tóxicos

Jairo Téllez Mosquera, MD


Médico Magister en Toxicología
Profesor Asociado Universidad Nacional de Colombia

INTRODUCCIÓN

E xiste una múltiple gama de sustancias quí-


micas que se presentan en forma de gas
o en forma líquida o sólida que en determina-
Sustancias químicas de uso misceláneo
Agentes Asfixiantes
Sofocantes
das circunstancias emiten vapores y que se Lacrimógenos
agrupan como agentes tóxicos volátiles, cuya
inhalación puede llevar a situaciones de emer-
gencia. SOLVENTES -HIDROCARBUROS
Para facilidad metodológica hemos agrupado Los hidrocarburos son compuestos químicos
estas sustancias en dos grandes grupos. de origen orgánico, que se obtienen a partir
del petróleo, cuya molécula esta formada bá-
Sustancias químicas de uso industrial sicamente por hidrógeno y carbono.
Solventes
Hidrocarburos En la siguiente tabla se pueden observar los
diferentes hidrocarburos de acuerdo a su cla-
sificación química.

CLASIFICACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS


HIDROCARBUROS ALIFÁTICOS

SATURADOS Alcanos Metano, etano, propano, butano, pentano, hexano, heptano, octano, nonano, decano, etc.
INSATURADOS Alquenos Eteno, propeno, buteno, penteno
Alquinos Acetileno
HALOGENADOS
Clorados Clorometano, diclorometano, triclorometano, tricloruro de vinilo, tetracloruro de carbono,
cloroetano dicloroetano, tricloroetano, cloruro de etilideno, cloruro de etileno,
hexacloroetano, pentacloroetano, cloruro de isopropilo, N- cloropropano, cloruro de
vinilideno, cloruro de alilo, cloruro de vinilo.
Bromados Bromuro de metilo , bromuro de metileno, bromoformo bromuro de vinilo, bromuro de
etilo, bromuro de etileno, tetrabromuro de acetileno, tetrabromuro de carbono
Yodados Yoduro de metilo, Yodoformo, Yoduro de etilo.

599
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

HIDROCARBUROS CÍCLICOS

ALICÍCLICOS
Cicloalcanos Ciclopropano, ciclobutano ciclopentano, ciclohexano
AROMÁTICOS
Monocíclicos Benceno, tolueno, cumeno, xileno, estireno, mestileno, etilbenceno
Bencenoides
Bicíclicos Bifenilos, alquilnaftalenos, fluoreno, naftaleno, tetralina, decalina
Policíclicos Indeno, Antraceno, Benzantraceno
HALOGENADOS
Clorados Monoclorobenceno, diclorobenceno, hexaclorobenceno, bifenilos policlorados,
policlorodibenzofuranos, naftalenos clorados
Bromados Bifenilos polibromados

Mezclas de hidrocarburos Baja constante de ionización: permite que


• Gasolina. la fracción no ionizable produzca toxicidad.
• Thinner.
• Nafta de petróleo. La vía respiratoria es la principal vía de entra-
da de los hidrocarburos al organismo huma-
no, seguida de la vía dérmica.
FISIOPATOLOGÍA GENERAL
La principal vía de eliminación de los hidro-
TOXICOCINÉTICA carburos del organismo es el riñón. La vía res-
piratoria a través del aire exhalado en forma
En general la mayoría de los hidrocarburos libre sin modificación, es la segunda vía en
solventes presentan las siguientes caracterís- frecuencia y de marcada importancia para al-
ticas toxicocinéticas comunes: gunos hidrocarburos como el benceno (50% -
60%), el tolueno (16%), el xileno (10% - 15%),
Alta volatilidad: capacidad de una sustancia el etano (60%). La volatilidad y la polaridad
de vaporizarse o permanecer en estado ga- de la sustancia, influyen en el grado de elimi-
seoso. nación en el aire exhalado; entre mayor volatili-
dad tenga una sustancia, mayor será su eli-
Alta tensión de vapor: describe la adheren- minación respiratoria y por consiguiente dis-
cia o cohesividad de las moléculas con la su- minuirá la absorción pulmonar.
perficie líquida.

Muy liposolubles: se caracterizan por tener METANO


un marcado carácter apolar y por tanto ser
altamente solubles en lípidos. Es el primer compuesto de la serie de los hi-
drocarburos alifáticos parafínicos.
Altamente lipofílicos: su afinidad por los
lípidos permite que tengan tendencia a acu- En estado natural es un gas. Es más liviano
mularse en los tejidos grasos. que el aire y por lo tanto difunde rápidamente
ocupando los espacios cerrados, alcanzando

600
CAPÍTULO XXVIII: INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

concentraciones peligrosas si no hay ventila- traciones de oxígeno en el aire respirable para


ción. los humanos no se encuentren por debajo de
18%.
FISIOPATOLOGÍA
Evaluación biológica
Es un gas que penetra al organismo exclusi- Se recomienda realizar saturación de oxíge-
vamente por vía inhalatoria, no se transforma no en hemoglobina y niveles de carboxihemo-
y tampoco se almacena. Una vez absorbido globina. Los niveles de carboxihemoglobina
se difunde rápidamente por pulmón, sangre y no deben estar por encima de 5- 7%.
otros tejidos. Actúa como un asfixiante simple
debido a que desplaza el oxígeno de la at- CUADRO CLÍNICO
mósfera y de la hemoglobina Los productos
de su descomposición química son el monó- Tiene acciones altamente peligrosas que pue-
xido de carbono y el dióxido de carbono. den incluso provocar la muerte de organismos
vivos ya sea por explosión o por anoxia tisular
AYUDAS DIAGNÓSTICAS al actuar como desplazante simple del oxígeno.

Evaluación ambiental Las relaciones encontradas en las concentra-


Por actuar como desplazante del oxígeno de ciones de oxígeno en la atmósfera respirable
la atmósfera, se recomienda que las concen- se muestran en la siguiente tabla:

CONCENTRACIÓN DE 02 EFECTO CLÍNICO


12% - 16% Cefalea, taquifigmia, incoordinación muscular.
10% - 14% Disnea, confusión mental.
6% - 10% Náuseas, depresión de conciencia.
< 6% Convulsiones, paro respiratorio y muerte.

ATENCIÓN PREHOSPITALARIA anoxia prolongada es de mal pronóstico para


Se debe aislar la persona del sitio de exposición. la vida del individuo y para sus funciones
neurológicas.
TRATAMIENTO INICIAL
Administrar oxígeno puro. PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN

PRONÓSTICO Por ser el metano producto de la descompo-


sición orgánica, es recomendable que aque-
En razón a que desplaza el oxígeno de la he- llas personas que por su trabajo se deban
moglobina, su efecto en la salud es la gene- exponer a ambientes potencialmente ricos en
ración de anoxia tisular. El pronóstico esta rela- metano, utilicen una protección respiratoria
cionado en forma directa con el tiempo que adecuada con mascaras apropiadas para tal
transcurra el individuo en anoxia tisular. La fin, que tengan incorporado oxígeno.

601
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PROPANO compuesto puro (n-pentano) hasta los grados


comerciales que contienen de 45-86% de pen-
Gas inhodoro, usualmente se le añade un tano, junto con isopentanos, isobutanos y
compuesto de olor fuerte, molesto para que ciclopentanos.
se detecte fácilmente cualquier escape. Es
inestable al calor; el monóxido de carbono es FISIOPATOLOGÍA
uno de los productos de su descomposición.
En contacto con oxidantes fuertes puede pro- Tiene las mismas características que el pro-
ducir incendio o explosión. El propano líqui- pano y el metano. Desplaza el oxígeno am-
do ataca algunos plásticos, cauchos y reves- biental.
timientos.
AYUDAS DIAGNÓSTICAS

FISIOPATOLOGÍA Muestra de cinco mL. de sangre en tubo con


anticoagulante, para ser analizado por croma-
Es un gas que penetra al organismo exclusi- tografía de gases.
vamente por vía respiratoria, no se transfor-
ma y tampoco se almacena. CUADRO CLÍNICO

Desplaza al oxígeno del aire cuando se pre- En altas concentraciones actúa como asfixian-
senta a altas concentraciones. la vía de elimi- te simple por desplazamiento del oxígeno,
nación es inhalatoria. puede producir efecto anestésico y depresor
del sistema nervioso central.
CUADRO CLÍNICO
Tiene acción irritante sobre las mucosas de
En altas concentraciones actúa como asfixian- vías respiratorias con las cuales se pone en
te simple por desplazamiento del oxígeno, contacto la sustancia.
puede producir un efecto anestésico y depre-
sor del sistema nervioso central. Tiene acción TRATAMIENTO INICIAL
irritante débil sobre las mucosas de vías res-
piratorias con las cuales se pone en contacto En presencia de efectos anestésicos se debe
la sustancia. administrar oxígeno húmedo o en su defecto
alejar al individuo de la exposición, colocán-
TRATAMIENTO INICIAL dolo en un lugar ventilado al aire libre.

En presencia de efectos anestésicos se debe


administrar oxígeno húmedo o en su defecto HEXANO
alejar al individuo de la exposición colocán-
dolo en un lugar ventilado o al aire libre. Líquido incoloro de olor a gasolina. En con-
tacto con oxidantes fuertes puede producir
PENTANO incendio o explosión.

Líquido incoloro, volátil, muy inflamable, de Ataca algunos cauchos, plásticos y recubri-
olor muy tenue. Se encuentra disponible en mientos.
diversos grados de pureza, que van desde el

602
CAPÍTULO XXVIII: INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

FISIOPATOLOGÍA En contacto dérmico, se observan efectos


irritantes leves como eritema pasajero. En in-
Su principal vía de absorción es la inhalatoria, toxicación crónica el órgano blanco es el sis-
por vía dérmica su absorción es limitada y por tema nervioso periférico.
vía oral es baja.
La neurotoxicidad periférica está dada por poli-
El metabolismo es hepático, la biotransforma- neuropatías en miembros superiores e infe-
ción se hace en el sistema microsomal donde riores que afectan la vía sensitiva y motora y
sufre procesos oxidativos. La eliminación se que pueden progresar hasta producir paráli-
realiza por el aire expirado en 70%; por la ori- sis motora completa. La polineuropatía gene-
na se eliminan sus metabolítos. ralmente se inicia en miembros inferiores y
después se instaura en los miembros superio-
Los metabolitos 2,5- hexanodiona y el 5-hidro- res y es de forma característica bilateral y si-
xi-2-hexanona, son los responsables de la métrica.
acción neurotóxica del n-hexano, produciendo
la degeneración de los axones del nervio peri- TRATAMIENTO INICIAL
férico. Al ponerse en contacto con la piel en
forma repetida, destruye el manto ácido pro- En ingestión de hexano, está contraindicado
tector de la dermis y favorece la aparición de el lavado gástrico y la provocación de emesis.
eccemas de contacto irritativo y/o alérgico. En exposición aguda (inhalatoria) cuando hay
evidencia de compromiso pulmonar con infec-
En exposición aguda a altas concentraciones ción sobreagregada, se administran antibió-
se disuelve en las membranas neuronales, ticos y terapia respiratoria de apoyo.
dando lugar a cortos periodos de embriaguez,
a depresión de conciencia que puede progre- La administración de corticoides en neumonitis
sar a coma y paro cardiorespiratorio. por hidrocarburos es ineficaz.

AYUDAS DIAGNÓSTICAS En presencia de neuropatía periférica secun-


daria a exposición crónica debe retirarse al
Evaluación ambiental individuo de la exposición, debido a que sus
Toma de muestras en tubos de absorción y efectos pueden ser progresivos.
análisis por cromatografía de gas.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
Evaluación Biológica
La muestra recomendada es de 5 c.c. de san- Debe mantenerse la concentración atmosfé-
gre en tubo con anticoagulante heparina o rica por debajo de los niveles admisibles por
EDTA. Para un tiempo de exposición no ma- medio de ventilación adecuada. Deben propor-
yor de 4 horas, para detectar 2,5 Hexanodiona cionarse elementos de protección personal
en orina 5 mg/g creatinina. (ropas, guantes, botas) impermeables para
prevenir el contacto con la piel.
CUADRO CLÍNICO
Se recomienda el uso de respiradores con
El hexano tiene un grado de toxicidad aguda admisión de aire puro o respiradores con flujo
dado por su DL50 (dosis letal 50%) que es continuo de oxígeno para concentraciones de
del orden de 15-30 g/kg. n-hexano de hasta 8800 mg/m3.

603
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Los exámenes periódicos en trabajadores ex- de la visión, secundarias a lesión del nervio
puestos a n-hexano, deben incluir la veloci- óptico.
dad de conducción nerviosa y examen oftal-
mológico para diferenciación de colores y
perimetria en forma anual. DICLOROMETANO
Solvente líquido altamente volátil, que tiene
CLOROMETANO dentro de sus usos generales e industriales
los siguientes:
Se conoce también con los nombres de mono-
clorometano y de metilcloruro. A temperatura • Solvente en procesos de extracción, en
ambiente se encuentra en forma de gas; en la especial cuando se desea alta volatilidad.
industria sometido a altas presiones pasa a • Removedor de pintura no inflamable.
estado líquido. Dentro de los usos industria-
les más importantes de éste compuesto, se FISIOPATOLOGÍA
pueden mencionar los siguientes:
La principal vía de absorción es la inhalatoria.
• Como agente metilante en la industria quí- En su proceso de biotransformación el princi-
mica. pal metabolito que se produce es el monóxido
• También se utiliza en la producción de de carbono, por lo cual se aumenta el nivel de
silicona, caucho y tetrametilo de plomo. carboxihemoglobina, que lleva de manera
• Como refrigerante doméstico e industrial. secundaria a hipoxia cerebral.

AYUDAS DIAGNÓSTICAS Su principal vía de excreción también es la


respiratoria como monóxido de carbono.
En el ambiente ocupacional se acepta como
valor límite permisible el de 100 ppm. CUADRO CLÍNICO

CUADRO CLÍNICO En la intoxicación aguda hay depresión de la


función del sistema nervioso central secun-
Es un potente narcótico; la exposición a altas daria a la hipoxia cerebral, produciéndose en
concentraciones produce cefalea, vértigo, ata- el individuo, somnolencia, lentificación de re-
xia y convulsiones; en un estado avanzado flejos, cefalea, disminución de la destreza
de intoxicación aguda severa se presenta co- manual y posible efecto narcótico.
ma y la muerte puede sobrevenir por falla res-
piratoria. En la intoxicación crónica, por expo- En intoxicación crónica, se describe el desa-
siciones continuadas en el medio ocupacio- rrollo lento y progresivo de un cuadro demen-
nal, predominan los síntomas neurológicos y cial, originado en la liberación de monóxido
psiquiátricos. de carbono a partir del metabolismo del diclo-
rometano almacenado en el tejido adiposo.
Después de varios años de exposición (más
de 10), se ha descrito la presencia de altera- TRATAMIENTO INICIAL
ciones neuropsiquiátricas, consistentes en irri-
tabilidad, depresión, cambios de personalidad, En casos de intoxicación aguda se debe ad-
insomnio y pueden presentarse alteraciones ministrar oxígeno en altas concentraciones

604
CAPÍTULO XXVIII: INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

que permitan reestablecer los niveles de oxí- yor parte no se biotransforma eliminándose
geno en la hemoglobina y disminuir niveles libre a través de la respiración. Un porcentaje
de carboxihemoglobina. En intoxicación cró- menor sufre un proceso de deshalogenación
nica, se debe tratar el cuadro demencial e ini- para ser eliminado por orina.
ciar una dieta hipograsa que permita dismi-
nuir el diclorometano almacenado en tejido CUADRO CLÍNICO
adiposo.
Anestésico general. Es un potente irritante de
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN piel y mucosas. Sus productos de degrada-
ción a partir de la deshalogenación que sufren,
Anualmente se deben realizar exámenes pe- al formarse radicales libres, son más irritantes
riódicos o de control que incluyen evaluación que el propio cloroformo.
psiquiátrica o de psicología y determinación
de niveles de carboxihemoglobina. TRATAMIENTO INICIAL

Aunque el diclorometano no es inflamable, a Tanto la intoxicación crónica como la aguda


alta temperatura ocurre su descomposición lo carecen de tratamiento específico. El manejo
que produce materiales tóxicos como cloruro es sintomático de acuerdo al compromiso de
de hidrogeno, fosfeno y otros. Se recomienda piel y mucosas por la acción irritante.
un buen mantenimiento en el trabajo y venti-
lación adecuada para que las concentracio-
nes del vapor y de sus productos de descom- TETRACLORURO DE CARBONO
posición permanezcan por debajo de los ni-
veles admisibles. Líquido volátil, no inflamable, incoloro, con olor
aromático dulce. A temperatura elevada sus
vapores se descomponen desprendiendo clo-
TRICLOROMETANO (CLOROFORMO) ro, cloruro de hidrógeno y algo de fosfeno.

Líquido incoloro con olor “dulce de hidrocarbu- Se emplea como desengrasante y agente de
ro”, también llamado cloroformo. Bajo la acción limpieza. También es usado como solvente
de elevada temperatura (ej. soldadura, incen-
dio) los vapores de cloroformo se descompo- FISIOPATOLOGÍA
nen dando origen a sustancias más tóxicas
como cloruro de hidrógeno y fosfeno. El prin- La vía de absorción inhalatoria es la más im-
cipal uso del cloroformo es como disolvente portante en exposición ocupacional, también
de grasas, ceras, plásticos, resinas. puede absorberse por vía oral; la absorción
por vía dérmica es baja. Una vez ha penetrado
Inicialmente fue utilizado en medicina como al organismo, se biotransforma en el hígado.
anestésico, antiséptico en limpieza de heridas
y como rubefaciente. AYUDAS DIAGNÓSTICAS

FISIOPATOLOGÍA Evaluación ambiental: para lectura directa


puede emplearse el medidor de haluros Davis,
Se absorbe bien por vía inhalatoria y oral, la calibrado para tetracloruro de carbono.
absorción por vía dérmica es pobre. La ma-

605
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EVALUACIÓN BIOLÓGICA nos estudios epidemiológicos lo han relacio-


nado en su exposición continua con aparición
Niveles de cloroformo en orina. de la enfermedad de Parkinson.
Niveles de tetracloruro de carbono en aire
espirado. TRATAMIENTO INICIAL
Pruebas de función hepática (bilirrubinas, tran-
saminasas) las cuales se encuentran eleva- En intoxicación aguda, de acuerdo a la vía de
das en intoxicación crónica. absorción se realiza el tratamiento así:
Pruebas de función renal (creatinina, BUN,
parcial de orina ) los dos primeros se encuen- • Si fue por vía inhalatoria, se administra oxí-
tran alterados y en el sedimento urinario se geno y respiración artificial, dependiendo
puede encontrar cilindros hialínos, granulosos ésta última del compromiso de la función
y proteinuria. respiratoria.
• Si se trata de un derrame en piel y mucosas,
CUADRO CLÍNICO se realiza baño exhaustivo con agua y jabón.
• Si la sustancia fue ingerida, se procede a
Es un compuesto considerado como altamen- realizar lavado gástrico utilizando carbón
te tóxico, ha sido comprobado como agente activado.
cancerígeno (carcinoma hapatocelular) en • En presencia de insuficiencia renal aguda,
estudios experimentales en animales. En hu- está indicada la hemodiálisis.
manos no ha sido comprobada totalmente su
carcinogenicidad. PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN

En general es más frecuente la intoxicación En el examen de ingreso de un trabajador a


crónica que la aguda. Los órganos blanco, son una empresa donde esté expuesto a este
el sistema nervioso periférico, el hígado, el ri- agente, se debe descartar los individuos que
ñón y el sistema nervioso central. tengan antecedentes de alcoholismo o pato-
logías hepáticas previas y se deben solicitar
En forma aguda actúa como un narcótico po- pruebas de función hepática y renal. Los exá-
tente; en el riñón puede producir daño glo- menes periódicos deben incluir pruebas de
merular directo, con la subsecuente necrosis función hepática y renal cada 6 meses.
tubular aguda, oliguria, y posterior anuria hasta
llevar a insuficiencia renal aguda y síndrome
urémico, con altas probabilidades de muerte. GASOLINA
En forma crónica compromete al hígado con FISIOPATOLOGÍA
daño mitocondrial, necrosis centrolubulilar y
cirrosis micronodular, lo que generan síndro- Tiene una buena absorción por las tres vías
me de hipertensión portal, con circulación (Inhalatoria, dérmica y oral). Se metaboliza a
venosa colateral. El compromiso hepático esta nivel hepático y su biotransformación es múl-
potenciado en los alcohólicos. tiple, pues su composición es una mezcla de
hidrocarburos.
En el sistema nervioso periférico central, com-
promete los nervios craneanos, especialmente Su acción patológica está caracterizada por
el nervio óptico con atrofia del mismo, algu- varios mecanismos de acción: Irritante y

606
CAPÍTULO XXVIII: INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

sensibilizante de piel y vías respiratorias; tie- recomienda utilización de antibióticos de am-


ne acción cáustica sobre mucosas, produce plio espectro. En presencia de convulsiones
daño directo sobre glomérulos renales y es se usan benzodiazepinas ó en su defecto
reconocida como sustancia psicoactiva que difenilhidantoina.
genera dependencia.

CUADRO CLÍNICO GASES IRRITANTES, ASFIXIANTES


Y LACRIMÓGENOS DE USO BÉLICO
Ambos tipos de intoxicación (Aguda y cróni-
ca) son graves y a nivel ocupacional, indistin- GAS CLORO
tamente se pueden presentar ambas.
FISIOPATOLOGÍA
En intoxicación aguda, cuando es inhalada ó
por vía dérmica, se presenta vértigo, cefalea Se comporta como irritante y corrosivo para
intensa, colapso circulatorio, convulsiones, mucosas de vías respiratorias. Al entrar en
coma y muerte. Cuando la vía de penetración contacto con los líquidos biológicos, libera oxí-
es oral, hay nauseas, vómito, dolor y ardor geno activo que aumenta la lesión de tejidos,
retroesternal, posteriormente hay dificultad al formar de manera secundaria ácido hipo-
respiratoria y a las 4-6 horas de la ingestión cloroso y ácido clorhídrico.
se puede iniciar un proceso de neumonitis
química. CUADRO CLÍNICO

En intoxicación crónica, se puede presentar La sintomatología inicial se presenta rápida-


compromiso multisistémico: mente al entrar en contacto el individuo con
la sustancia, se caracteriza por irritación ocu-
• Sistema respiratorio: puede ocasionar un lar y nasal severa, sensación de sofoco, ardor
cuadro asmático, también daño endotelial torácico, tos, dificultad respiratoria progresiva.
directo y neumonítis química, con sobre- Si la exposición continúa, se incrementa la
infección agregada. dificultad respiratoria por edema de las vías
• Sistema renal: se desarrolla glomerulone- respiratorias, que puede llevar a insuficiencia
frítis crónica, con oliguria y falla renal. respiratoria aguda.
• Sistema cardiopulmonar: hay un aumento
en secreciones de adrenalina, con arritmia TRATAMIENTO PREHOSPITALARIO
cardiaca y aumento de frecuencia cardiaca.
• Efectos mentales: produce ansiedad y de- Una vez en contacto el individuo con el gas,
presión. Se ha comprobado que genera se debe retirar inmediatamente de la atmós-
dependencia psíquica. fera contaminada. Es necesario realizar lava-
do abundante de ojos con agua o suero fisio-
TRATAMIENTO INICIAL lógico si hay disponibilidad.

En caso de ingestión, está contraindicado in- TRATAMIENTO INICIAL


ducir el vómito. Se puede realizar lavado gás-
trico, con sonda nasofaríngea y carbón acti- Una vez en la institución hospitalaria si per-
vado. Si hay evidencia de cambios radiográ- siste la sintomatología respiratoria y de irrita-
ficos, que sugieran neumonitis química, se ción ocular, se debe repetir lavado exhaustivo

607
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de ojos con suero fisiológico, colocar oxígeno TRATAMIENTO PREHOSPITALARIO


húmedo al 100% hasta obtener mejoría de la
sintomatología respiratoria. Se debe retirar al individuo de la zona de ex-
posición y colocarlo en zona aireada, retirar
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN ropa contaminada y evitar exponer al indivi-
duo a líquidos o ropa húmeda, debido a que
En las industrias que utilicen gas cloro en sus al contacto con líquidos la sustancia se hidro-
procesos debe existir en lo posible en los bo- liza agravando el cuadro clínico.
tiquines de emergencia suero fisiológico y una
bala de oxígeno para intervenir en forma pre- TRATAMIENTO INICIAL
coz en caso de una emergencia.
• Lavado de ojos con suero fisiológico en
forma exhaustiva.
CLOROPRINA • Lavado de piel contaminada con abundan-
(TRICLORONITROMETANO) te agua y jabón.
• Si persiste sintomatología respiratoria, se
Es un hidrocarburo halogenado volátil que fue administra oxígeno húmedo.
utilizado como arma bélica en la primera gue- • Si se presenta laringoespasmo, se debe
rra mundial, como agente sofocante y asfixian- practicar intubación endotraqueal y venti-
te. Posteriormente se ha utilizado como fumi- lación mecánica.
gante de granos y cereales, en la fabricación • En presencia de infección respiratoria
de fungicidas, insecticidas y rodenticidas. sobreagregada, iniciar antibioticoterapia.

FISIOPATOLOGÍA
LECTURAS RECOMENDADAS
Puede absorberse por vía respiratoria (la prin-
cipal vía de entrada al organismo humano) o 1. Arriola A, Moreno E. Accidentes con materias pe-
por contacto dérmico. Una vez en contacto con ligrosas: normas de actuación. En: Manual de
las mucosas húmedas respiratorias, se hidro- Toxicología básica. Editado por E Mencías, L
Ayero. Ediciones Díaz de Santos S.A. Madrid,
liza produciendo de manera secundaria ácido
2000.
clorhídrico y ácido nítrico, que son los respon- 2. Centro de neurociencias de cuba. Estudio de los
sables de los efectos clínicos. efectos sobre el Sistema nervioso de la exposi-
ción potencial a solventes orgánicos. Edición Ins-
CUADRO CLÍNICO tituto de Seguros Sociales ISS. Bogotá, 1998.
3. Davies R, Buss DC, Routledge PA. Algunas sus-
La sintomatología inicial consiste en lagrimeo, tancias químicas industriales importantes. En:
irritación y edema de mucosa nasal y faringea, Manual de Toxicología básica. Editado por E
Mencías, L Mayero. Ediciones Díaz de Santos S.A.
tos seca, rinorrea, sofocación, cefalea y difi-
Madrid, 2000.
cultad respiratoria. Al continuar la exposición 4. Klaassen C, Watkins J. Respuestas tóxicas de
la dificultad respiratoria progresa, puede pre- los ojos. En: Casarett and Doull Manual de
sentarse laringoespasmo y edema pulmonar Toxicología. Editado por CD Klaassen, MO Amdur,
agudo. Quinta edición Ediciones McGraw-Hill –
Interamericana. México, 2001.
5. Klaassen C, Watkins J. Respuestas tóxicas del
aparato respiratorio. En: Casarett and Doull Ma-

608
CAPÍTULO XXVIII: INHALACIÓN DE GASES TÓXICOS

nual de Toxicología. Editado por CD Klaassen, MO cología Médica: Clínica y Laboral. Editado por J
Amdur, Quinta edición Ediciones McGraw-Hill – Ladrón de Guevara, V Moya. McGraw Hill
Interamericana. México, 2001. Interamericana. Madrid, 1995.
6. Ladrón de Guevara J, Moya V. Hidrocarburos 9. Ladrón de Guevara J, Moya V. Derivados Halo-
Aromáticos. En: Toxicología Médica: Clínica y La- genados de los Hidrocarburos Aromáticos. En:
boral. McGraw Hill – Interamericana de España. Toxicología Médica: Clínica y Laboral. Editado por
Madrid, 1995. J Ladrón de Guevara, V Moya. McGraw Hill
7. Ladrón de Guevara J, Moya V. Hidrocarburos. Interamericana de España. Madrid, España. 1995.
En: Toxicología Médica: Clínica y Laboral. Mc Graw 10. Mencías E. Guerra Química. En: Manual de
Hill Interamericana de España. Madrid, 1995. Toxicología básica. Editado por E Mencías, L Ma-
8. Ladrón de Guevara J, Moya V. Derivados Halo- yero. Ediciones Díaz de Santos S.A. Madrid,
genados de los Hidrocarburos Alifáticos. En: Toxi- 2000.

609
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXIX

Principios de ventilación mecánica

Edgar Celis, MD, FCCM


Departamento de Anestesiología y Cuidado Intensivo
Fundación Santa Fe de Bogotá
Presidente Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado intensivo

Carlos Guerrero, MD
Departamento de Anestesiología
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN CLASIFICACIÓN

E n los centros hospitalarios donde se atien-


den pacientes con enfermedades y enti-
dades de alta complejidad, los servicios de
Los ventiladores se clasifican de acuerdo a
las siguientes variables:
• Generación de fuerza inspiratoria.
urgencia son los receptores de primera línea, • Variables de control.
y es allí donde se inicia el tratamiento que en • Variables de fase.
muchos casos requiere soporte respiratorio
mediante ventilación mecánica.
GENERACIÓN DE FUERZAS INSPIRATORIAS
El personal que atiende urgencias -médicos,
enfermeras y técnicos- debe estar familiari- Fuerza es definida como masa x aceleración.
zado con los principios generales de la venti- En términos fisiológicos la fuerza es medida
lación mecánica. como una presión. Los ventiladores mecáni-
cos deben proporcionar la fuerza que normal-
La ventilación mecánica se hace por medio mente generan los músculos inspiratorios. De
de ventiladores, que son unidades que pro- este concepto nace la primera clasificación de
veen las necesidades respiratorias cambian- los ventiladores, ya sea creando presión po-
tes de una persona en estado crítico. Su ma- sitiva o presión negativa extratorácica:
nejo siempre debe estar a cargo de personal
especializado, y generalmente se hace en las Ventiladores de presión negativa. Fueron
unidades de cuidado intensivo. los primeros ventiladores, inventados en 1928
por Dinker y Shaw. Generan presión negativa
Los objetivos de la ventilación mecánica son: que crea presión subatmosférica alrededor del
• Mejorar el intercambio de gas a nivel tórax y una presión similar a la atmosférica
pulmonar. en las vías aéreas. El gradiente de presión
• Aliviar la dificultad respiratoria. que se produce es suficiente para mover la
• Alterar la relación presión/volumen. caja torácica y permitir el ingreso de aire.

610
CAPÍTULO XXIX: PRINCIPIOS DE VENTILACIÓN MECÁNICA

Ventiladores de presión positiva. Crean una del volumen, controladores de presión o con-
fuerza inspiratoria gracias a presión intrapul- troladores de flujo.
monar positiva. Dentro de la evolución de los
ventiladores de presión positiva se pueden Ventiladores controladores de presión. En
diferenciar tres cambios generacionales: la ecuación de movimiento del sistema respi-
ratorio la presión es determinada por variacio-
• Primera generación: se caracterizan por un nes en el flujo y en el volumen. Son máquinas
mecanismo neumático de control. Utilizan que permiten un flujo de gas al disparar una
temporizadores y reguladores neumáticos válvula accionada por el esfuerzo del paciente
para aplicar la presión a los pulmones. o por un mecanismo automático, el cual se
• Segunda generación: aparecieron a fina- mantiene hasta que se alcanza una presión
les de los años 1960, usaban tecnología máxima preestablecida.
electrónica análogica que controlaba los
elementos. Ventiladores controladores de volumen. Con
• Tercera generación: aparecieron a comien- estos ventiladores el volumen se mantiene inal-
zos de los 80 con el advenimiento de los terado a medida que se cambia la resistencia.
microprocesadores. Proporcionan un ma- El flujo se mantiene constante. De acuerdo a
yor control mejorando de forma dramática la ecuación de movimiento del sistema respi-
la seguridad. ratorio, si el volumen es la variable controlada
y el flujo se mantiene constante debido a su
VARIABLES DE CONTROL relación con el volumen, la presión debe ser la
variable cambiante en presencia a una carga
Existen tres factores que afectan los meca- a vencer, que también cambia con el tiempo.
nismos de la respiración: La curva de volumen mantiene una caída posi-
tiva constante. Se proporciona siempre el mis-
1. Fuerza. mo volumen independiente de la resistencia
2. Frecuencia. que ofrezca el sistema respiratorio del paciente.
3. Volumen.
Ventiladores controladores de flujo. Man-
La relación entre presión, volumen y flujo se tienen un flujo y volumen constantes ante la
puede resumir en la ecuación del movimiento presencia de una carga variable (resistencia).
del sistema respiratorio: La diferencia fundamental con los de volumen
es que lo miden en forma indirecta con un
PRESIÓN = VOLUMEN / DISTENSIBILIDAD + transductor de flujo. Este es medido y calcu-
(RESISTENCIA / FLUJO) lado como una función del tiempo.

En esta ecuación la resistencia y la distensibili- VARIABLES DE FASE


dad son generalmente constantes (inherentes
al paciente). La presión, el flujo y el volumen El ciclo respiratorio puede ser dividido en cua-
cambian durante el tiempo, es decir, son las tro fases diferentes:
variables que pueden ser modificadas por el
operador. De la ecuación de movimiento se 1. Transición de la espiración a la inspiración.
desprende que un ventilador puede modificar 2. Inspiración.
una de las tres variables. Los ventiladores, 3. Transición de la inspiración a la espiración.
entonces, son clasificados como controladores 4. Espiración.

611
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En este contexto, la presión, el flujo, el volu- te la capacidad del paciente. Se inicia a una
men y el tiempo son todas variables de fase. frecuencia predeterminada y se finaliza de
acuerdo a unas variables de ciclo ajustadas
por el operador. Puede controlarse por presión
PARÁMETROS DE VENTILACIÓN o por volumen. La ventilación mecánica con-
trolada por volumen ha sido ampliamente uti-
En la actualidad los ventiladores proveen de- lizada en pacientes apnéicos como resultado
cenas de formas para proporcionar el soporte de daño cerebral, sedación o parálisis de los
ventilatorio a los pacientes. músculos respiratorios.

TIPOS DE VENTILACIÓN VENTILACIÓN ASISTIDA CONTROLADA

Hay tres tipos diferentes de ventilación: En este modo se le permite al paciente iniciar
una respiración. La frecuencia es dada por el
1. Espontánea. valor preestablecido en el ventilador o por las
2. Asistida. respiraciones espontáneas del paciente. En
3. Controlada. ausencia de un esfuerzo inspiratorio se admi-
nistra una ventilación controlada. La presión
La ventilación espontánea se basa en la de- necesaria para alcanzar el volumen corriente
manda del paciente. El flujo y el volumen es- deseado puede ser proporcionada únicamente
tán determinados por el esfuerzo inspiratorio por la máquina o en parte por el paciente.
del individuo. El flujo se inicia cuando el esfuer-
zo inspiratorio alcanza el nivel de sensibilidad Aunque los parámetros sean seleccionados
preestablecido. A mayor esfuerzo inspiratorio adecuadamente, los pacientes realizan cerca
mayor será el flujo obtenido. de un tercio del trabajo realizado por el venti-
lador en condiciones pasivas.
La ventilación asistida se inicia cuando el
esfuerzo inspiratorio del paciente es igual al VENTILACIÓN MANDATORIA INTERMITENTE
nivel de sensibilidad determinado por el ope-
rador del ventilador. Este modo de ventilación le permite al paciente
respirar espontáneamente entre ventilaciones
En la ventilación controlada el paciente es controladas. La frecuencia del ventilador se
ventilado de acuerdo a las variables de con- adapta para asegurar que el ventilador soporte
trol preestablecidas por el operario. En ausen- al paciente en caso de que éste no respire.
cia de un esfuerzo inspiratorio del paciente,
el ventilador proporciona la respiración con- VENTILACIÓN MANDATORIA
trolada. INTERMITENTE SINCRÓNICA (Syncrhronous
Intermittent Mandatory Ventilation, SIMV)

MODOS DE VENTILACIÓN Las respiraciones proporcionadas por la má-


quina están sincronizadas con las respiracio-
VENTILACIÓN MANDATORIA CONTROLADA nes espontáneas del paciente. La sincroniza-
ción se obtiene al dividir la frecuencia respira-
En este modo sólo se proporcionan ventila- toria en ciclos de SIMV. Al paciente se le per-
ciones controladas para reemplazar totalmen- mite respirar espontáneamente durante esos

612
CAPÍTULO XXIX: PRINCIPIOS DE VENTILACIÓN MECÁNICA

ciclos. Si no se detecta esfuerzo inspiratorio, puede repercutir en forma importante sobre


se inicia ventilación controlada justo en el co- el gasto cardiaco.
mienzo del siguiente ciclo de SIMV.
Se han empleado tres niveles de PEEP:
VENTILACIÓN MINUTO 1. PEEP fisiológica de 1-5 cm de agua. Se
MANDATORIA EXTENDIDA usa primordialmente en el postoperatorio
inmediato y en el trauma.
Este modo se basa en la ventilación espontá- 2. PEEP convencional de 5-20 cm de agua.
nea del paciente. El operario determina un Busca mejorar la capacidad residual fun-
volumen minuto mínimo que el paciente debe cional en pacientes con lesión pulmonar
mantener, luego ajusta en el ventilador el flu- moderada a severa.
jo y el volumen necesarios para mantener este 3. Super PEEP, prácticamente en desuso. En
volumen minuto. 1975 se introdujo el término “mejor PEEP”,
el cual se refiere al PEEP que produce un
VENTILACIÓN CON PRESIÓN POSITIVA máximo efecto sobre la capacidad residual
CONTINUA EN LA VÍA AÉREA (CPAP) sin producir efectos deletéreos en la fun-
ción cardiopulmonar.
En este modo el paciente respira en forma
espontánea. La presión en la vía aérea se ele- VENTILACIÓN CONTROLADA POR PRESIÓN
va con relación a la presión atmosférica con CON RELACIÓN INSPIRACIÓN/ESPIRACIÓN
el fin de aumentar la capacidad residual fun- INVERTIDA
cional. El flujo se administra una vez se al-
En esta forma de ventilación el tiempo inspira-
canza el nivel predeterminado de sensibilidad.
torio es mayor al espiratorio. El efecto final es
una elevación en la presión al final de la espira-
VENTILACIÓN CON PRESIÓN POSITIVA AL
ción. Esto ocurre debido a que el tiempo espi-
FINAL DE LA ESPIRACIÓN (PEEP)
ratorio no es lo suficientemente prolongado
como para permitir la salida del gas de los
El término PEEP significa que la presión en la
pulmones antes de que se inicie un nuevo ci-
vía aérea es elevada por encima de la presión
clo. El aumento de la presión en este caso se
atmosférica una vez se completa la espiración.
denomina auto-PEEP.
El principal efecto benéfico del PEEP es el
aumento de la PaO2, lo que permite disminuir VENTILACIÓN CON PRESIÓN DE SOPORTE
la fracción inspirada de oxígeno (FiO 2) con la
consecuente reducción del riesgo de toxici- La presión de soporte aumenta el esfuerzo
dad por oxígeno. Distiende las unidades espontáneo del paciente por medio de presión
pulmonares ya abiertas, lo que previene el positiva determinada. El paciente no tiene que
colapso de los alvéolos inestables, reclutando realizar un trabajo tan elevado para mantener
unidades pulmonares colapsadas y distribu- su ventilación espontánea. El volumen corrien-
yendo líquidos dentro del pulmón. te está determinado por el esfuerzo inspiratorio
del paciente, la presión positiva del ventilador
Los diversos métodos que se utilizan para pro- y la impedancia del sistema.
ducir PEEP se basan en aumentar la resis-
tencia durante la espiración. Esto trae como Este modo ventilatorio tiene dos subdivisiones:
consecuencia aumento de la presión intratorá- 1. Ventilación controlada por presión (Presure
cica y disminución del retorno venoso, lo que Controlled Ventilation, PCV).

613
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Ventilación con presión de soporte VENTILACIÓN EN POSICIÓN PRONA


(Pressure Supported Ventilation, PSV).
La ventilación en posición prona ha sido des-
La PCV es utilizada primordialmente cuando crita como un método que mejora en algunos
se requiere soporte ventilatorio en pacientes casos la oxigenación en los pacientes con
con lesión pulmonar leve a moderada. Se ini- SDRA. Varios mecanismos pueden explicar
cia con PCV y a medida que la presión pulmo- el aumento de la oxigenación vista en la posi-
nar va mejorando se cambia a PSV con nive- ción prona:
les de presión de soporte menores a 20 mmHg.
La PSV generalmente se utiliza con SIMV. • Reexpansión de consolidaciones dorsales.
• Mejoría del drenaje de secreciones relacio-
VENTILACIÓN DE ALTA FRECUENCIA nado con cambios ejercidos por la fuerza
de gravedad.
Ventila a los pacientes con frecuencias inu- • Distribución más homogénea del flujo san-
sualmente altas y volúmenes corrientes bajos. guíneo.
Está indicado en neonatos entre 23 y 41 sema- • Menor compresión del corazón sobre al-
nas de edad gestacional. La frecuencia puede gunas áreas del pulmón.
estar entre 150 y 1.500 ventilaciones por mi- • Aumento de la capacidad residual
nuto. A medida que aumenta la frecuencia se funcional.
administra volumen corriente cada vez más • Mayor distensibilidad de la caja torácica.
bajo, al punto que la ventilación alveolar ocurre
con volúmenes menores al espacio muerto. La ventilación prona debe estar disponible
El intercambio gaseoso en este modo venti- entre los recursos utilizados en las unidades
latorio no es completamente entendido, pero de cuidado intensivo. Su utilidad está soporta-
se cree que está basado en la mezcla de ga- da en los resultados de varios estudios. El uso
ses que ocurre debido a la turbulencia causa- debe estar sujeto a la experiencia y seguri-
da, ya sea por las divisiones bronquiales o por dad ofrecidas por el personal médico y de
flujos pico instantáneos altos. enfermería de la unidad.

VENTILACIÓN DIFERENCIAL
INDICACIONES DE VENTILACIÓN
En este tipo de ventilación se usa un tubo en- MECÁNICA
dotraqueal de doble luz, el cual se conecta a
dos ventiladores diferentes que son ajustados Las indicaciones para utilizar ventilación me-
a las características mecánicas (distensibi- cánica derivadas de un estudio internacional
lidad) de cada uno de los pulmones. Está in- con 1.638 pacientes en ocho países son (Es-
dicado como primera línea en el manejo de teban et al 2000):
entidades como hemoptisis masiva, protei-
nosis alveolar, riesgo de aspiración interbron- 1. Falla respiratoria aguda 66%.
quial y en trasplante pulmonar unilateral. Tam- 2. Coma 15%.
bién se usa en el manejo de enfermedades 3. Exacerbación de la EPOC 13%.
pulmonares unilaterales o asimétricas y en el 4. Enfermedades neuromusculares 5%.
tratamiento de fístulas broncopleurales que no
responden al manejo tradicional.

614
CAPÍTULO XXIX: PRINCIPIOS DE VENTILACIÓN MECÁNICA

RETIRO DE LA VENTILACIÓN El método original de retiro del ventilador uti-


MECÁNICA (WEANING) lizaba un tubo en T en periodos de cinco minu-
tos, los cuales eran gradualmente prolonga-
En la mayoría de los casos el paciente que dos de acuerdo con el estado del paciente.
recibe ventilación mecánica puede reasumir Cuando el individuo era capaz de mantener
la respiración con poca o ninguna dificultad. la ventilación espontánea por un tiempo de 2
Cerca de 20-30% de los pacientes fallan en horas, se realizaba la extubación.
los intentos iniciales de descontinuar la venti-
lación mecánica. En general cerca de 40% del La ventilación mandatoria intermitente (VMI)
tiempo que el paciente recibe ventilación me- y la presión de soporte fueron introducidos a
cánica es utilizado en tratar de retirarla. comienzos de los años 1970 y 1980, respecti-
vamente. En la actualidad son técnicas am-
Las fallas en los intentos de retiro de la ventila- pliamente utilizadas para retirar la ventilación
ción mecánica se deben más comúnmente a mecánica. Cuando se usa VMI se reduce la
disfunción de los músculos respiratorios, la cual frecuencia del ventilador en forma escalona-
resulta del desequilibrio entre la capacidad da (1-3 respiraciones por minuto). Cuando se
neuromuscular del sistema respiratorio y la usa la presión de soporte, se reduce el nivel
carga de trabajo que debe ejercer. La hipoxe- de presión en forma paulatina (3-6 cm
mia es una causa menos común de fracaso. de agua) de acuerdo con la frecuencia respi-
ratoria.
En general no se debe iniciar el retiro de la
ventilación mecánica en el caso de inestabili- Otro método posible es el empleo de respira-
dad hemodinámica o hipoxemia persistente. ción espontánea a través de un tubo en T, rea-
Las variables usadas para predecir el éxito del lizado en un sólo intento. Si el paciente pue-
retiro del soporte ventilatorio se pueden divi- de mantener la ventilación espontánea por 30-
dir en aquellas que evalúan el intercambio ga- 60 minutos sin dificultad respiratoria, puede
seoso, las que evalúan la fuerza muscular y ser extubado. Si se presentan signos de difi-
las que tratan de evaluar la integración de cultad, la prueba finaliza y se reinicia la venti-
ambas. lación mecánica. Para permitir a los músculos
respiratorios recuperarse del estrés de la prue-
Entre los criterios de oxigenación están: ba, se ventila al paciente con un alto nivel de
• PaO2 > 60 mmHg con FiO2 <40%. asistencia por un periodo de 12-24 horas.
• Gradiente alveolo arterial <300 mmHg. Posteriormente se vuelve a intentar el retiro
• PEEP <5 cm de agua. del ventilador.

Entre los criterios ventilatorios se tienen:


• PaCO2 <50 mmHg. COMPLICACIONES
• pH >7,4. DE LA VENTILACIÓN MECÁNICA
• Frecuencia respiratoria <30 por minuto.
• Volumen corriente espontáneo >5ml/kg de La ventilación mecánica invierte la fisiología
peso. normal de la ventilación, al crear presión po-
• Capacidad funcional vital mayor 10 mL/kg sitiva durante la fase inspiratoria que produce
de peso. una serie de alteraciones sobre la circulación
• Presión inspiratoria máxima <20 cm de sistémica, el gasto cardiaco, la circulación
agua. pulmonar y el retorno venoso.

615
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El barotrauma es la complicación más común nución del retorno venoso al corazón. También
con una incidencia reportada en la literatura hay desviación del tabique interventricular
de entre 7-25%. Se puede presentar en forma hacia la cavidad ventricular izquierda, lo que
de neumotórax, enfisema mediastinal y enfise- reduce el llenado diastólico.
ma subcutáneo. La frecuencia está más rela-
cionada con la patología de base que con el
nivel de presión máximo en la inspiración. LECTURAS RECOMENDADAS

El neumotórax generalmente se evidencia por 1. American College of Chest Physicians. Concensus


un incremento súbito en la presión inspiratoria Conference: Mechanical Ventilation. Chest 1993;
104:1883-1959.
pico. Si el barotrauma lleva el neumotórax a
2. Bochard L. Pressure support ventilation. En:
tensión, aparece inestabilidad hemodinámica, Principles and Practice of Mechanical Ventilation.
convirtiéndose en una verdadera emergencia Editado por MJ Tobin. McGraw Hill. New
médica. York,1994.
3. Brochard L, Rauss A: Comparison of three
Prácticamente todos los pacientes intubados methods of gradual withdrawal form ventilatory
support during weaning from mechanical
que permanecen en la unidad de cuidado in-
ventilation. Am J Respir Crit Care Med 1994;
tensivo son colonizados por los gérmenes pre- 150:896-903.
dominantes en las primeras 48 horas. Cerca 4. Caho D, Scheinman D. Weaning from mechanical
de 20% desarrollan neumonía nosocomial. ventilation. Crit Care Med 1998;14:800-819.
5. Dueñas C. Síndrome de lesión pulmonar asocia-
Los pacientes sometidos a ventilación mecá- do a ventilación mecánica. Rev Col Neumol 2001;
nica con presión positiva pueden desarrollar 13:121-129.
6. Esteban A, Anzueto A, Alia I. How is mechanical
atelectasias, debido a que la presión se dirige ventilaton employed in the intensive care unit? An
preferencialmente a las zonas pulmonares con international utilization review. Am J Resp Crit
mayor distensibilidad. Las zonas con menor Care Med 2000; 16:1450-1458.
distensibilidad reciben así menor volumen, 7. Kathleen G. The ventilator. Crit Care Clin 1998;
tendiendo a formar atelectasias. 14:463-580.
8. Meade M. An evidence based approach to
pressure and volume limited ventilation strategies.
La reducción del gasto cardiaco asociado con Crit Care Med 1998; 14:719-723.
la presión positiva es otra complicación co- 9. Ortiz G. Ventilación mecánica. Rev Col Neumol
mún y seria de la ventilación mecánica. Están 1998; 10:106-111.
implicados varios procesos, como el aumento 10. Tobin MJ. Advances in mechanical ventilation. N
de la presión intratorácica que produce dismi- Engl J Med 2001; 344:1986-1996.

616
CAPÍTULO XXX: PRINCIPIOS DE INHALOTERAPIA

CAPÍTULO XXX

Principios de inhaloterapia

Luisa Fernanda Güell Camacho, Enf


Enfermera Especialista en Cuidado Respiratorio
Asociación Médica de los Andes, Bogotá

E sta guía de práctica clínica describe la se-


lección de dispositivos y la administración
de aerosoles en la vía aérea superior y el
1 Humidificar los gases secos inspirados
usando agua en aerosol.
2 Mejorar la movilización y la evacuación de
parénquima pulmonar en el paciente agudo las secreciones respiratorias, incluyendo la
que acude a un servicio de urgencias. inducción de esputo, usando aerosoles
blandos (agua o solución salina hipertónica
o hipotónica).
DESCRIPCIÓN DEL PROCEDIMIENTO 3 Administrar medicamentos con efecto lo-
cal o sistémico.
La aerosolterapia es la administración nebuli-
zada de partículas al tracto respiratorio con
propósitos terapéuticos. INDICACIONES
Un aerosol es una suspensión de partículas 1. Administración de medicamentos con efec-
líquidas o sólidas de 0,001 a 100 micras en tos locales o sistémicos.
un volumen de gas. El rango de tamaño de 2. Inflamación de la vía aérea superior (por
partículas que interesa desde el punto de vis- ejemplo, la inflamación secundaria a larin-
ta terapéutico va desde 1 a 10 micras. Las gotraqueobronquitis).
partículas dentro de este rango son suficien- 3. Anestesia de las vías aéreas (por ejemplo,
temente pequeñas para existir en suspensión el control del dolor, la tos y las náuseas
y entrar a los pulmones y suficientemente durante fibrobroncoscopia).
grandes para depositarse allí portando la can- 4. Enfermedad de las vías aéreas inferiores
tidad requerida de un agente terapéutico. Las (administración de broncodilatadores, anti-
partículas de 10-15 micras se depositan en la bióticos, antivirales, antimicóticos, surfac-
superficie de la nariz y la boca; las partículas tantes y enzimas, sobre los bronquios y el
de 5-10 micras en las vías aéreas superiores parénquima pulmonar).
(de la tráquea hasta los bronquios de sexta 5. Enfermedad sistémica (por ejemplo, en la
generación) y las de 1-5 micras, denomina- administración de péptidos como la hormo-
das fracción respirable de la nube de aerosol, na antidiurética).
alcanzan las vías respiratorias bajas más allá 6. Fluidificación de secreciones bronquiales
de los bronquios de sexta generación. secas difíciles de expectorar.
7. Humidificación del oxígeno administrado
Los tres objetivos generales la de aerosoltera- para prevenir o revertir la retención de
pia en el cuidado respiratorio son: secreciones.

617
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

8. Humidificación de las vías aéreas inferio- La administración de aerosoles para aneste-


res cuando la vía aérea superior ha sido sia de la vía aérea puede producir:
sobrepasada mediante intubación o
traqueostomía. • Inhibición del reflejo nauseoso.
• Espasmo laríngeo.
• Deshidratación del epitelio.
CONTRAINDICACIONES • Reacción alérgica.
• Efectos sistémicos excesivos (por ejemplo,
Las contraindicaciones se relacionan específi- arritmia por lidocaina).
camente con la hipersensibilidad conocida a • Broncoespasmo.
los medicamentos administrados. Es de gran • Infección nosocomial por contaminación del
importancia revisar las indicaciones y contra- dispositivo o de la medicación administrada.
indicaciones de los medicamentos antes de
iniciar el procedimiento. Los medicamentos para enfermedad sistémica
pueden causar irritación nasal o efectos tóxicos.
La utilización de aerosoles blandos (ejemplo
solución salina hipertónica) está contraindi- Los riesgos asociados con la aerosolterapia
cada en pacientes con obstrucción bronquial en las vías aéreas inferiores y en el parén-
o con historia de hiperreactividad de la vía quima pulmonar incluyen:
aérea.
• Retención de secreciones secundaria a la
sobrehidratación de las mismas ocasionan-
RIESGOS Y COMPLICACIONES do obstrucción total o parcial de las vías
aéreas.
Los riesgos y complicaciones de la aerosolte- • Broncoconstricción asociada, relacionada
rapia medicamentosa se relacionan directa- en algunos casos con el uso de solución
mente con los siguientes aspectos que deben salina al 0,45% o al uso de micronebuliza-
ser adecuadamente evaluados y controlados: dores ultrasónicos.
tipo de medicación, dosis, contraindicaciones • Efectos cardiovasculares asociados con
específicas, dispositivo para la administración, broncodilatadores a altas dosis.
tiempo de utilización y técnica aséptica en el • Sobre dosificación del medicamento, de-
manejo del equipo y de las soluciones. bido al uso repetitivo de nebulizadores tipo
Jet y ultrasónicos, en cuyos reservorios se
A continuación se describen los riesgos y com- depositan partículas del medicamento.
plicaciones asociados con la aerosolterapia • Infecciones nosocomiales, principalmente
según la indicación y el sitio de administra- por bacilos gram negativos como P. aerugi-
ción: nosa, relacionadas con una inadecuada
asepsia y esterilización de los equipos.
La administración de medicamentos anti-
inflamatorios en la vía aérea superior puede
producir: LIMITACIONES
DE LA AEROSOLTERAPIA
• Broncoespasmo.
• Síntomas de rebote. • En la vía aérea superior: en presencia de
• Efectos sistémicos colaterales. excesiva secreción nasal o de edema de

618
CAPÍTULO XXX: PRINCIPIOS DE INHALOTERAPIA

la mucosa nasal, el medicamento puede estertores, aumento del trabajo respirato-


no alcanzar el sitio de acción propuesto. rio y uso de músculos accesorios, dismi-
Igualmente, el depósito puede verse com- nución del flujo pico espiratorio en más del
prometido por la presencia de pólipos 80% de lo esperado) e hipersecreción bron-
nasales o por una desviación del tabique. quial.
• En el parénquima pulmonar: el depósito de • Cuando se requiere inducción del esputo
las partículas en aerosol es pobre y depen- para diagnóstico (ejemplo: pacientes con
de de las propiedades físicas del aerosol sospecha de neumonía por Pneumocystis
(tamaño, concentración, humedad) y la co- carinii o tuberculosis).
laboración y el patrón respiratorio del pa-
ciente (volumen inhalado, frecuencia res-
piratoria). Las siguientes situaciones clíni- EVALUACIÓN DEL RESULTADO
cas están asociadas con reducción del
depósito del aerosol en el parénquima pul- • En inflamación de la vía aérea superior, la
monar; en su presencia, se debe conside- efectividad de la aerosolterapia puede ser
rar el aumento de la dosis del medicamen- comprobada sí se reduce el estridor, se re-
to para lograr optimizar su penetración y duce la disfonía, se evidencia mejoría radio-
con ello el depósito: ventilación mecánica, gráfica del tejido blando y se observa dis-
vía aérea artificial y obstrucción severa. minución del trabajo respiratorio y del uso
de los músculos accesorios.
• La efectividad de la administración del ae-
ESTIMACIÓN DE LA NECESIDAD rosol para anestesia de la vía aérea está
DE UTILIZAR UN AEROSOL dada por la reducción del dolor y de la in-
comodidad del paciente.
La presencia de una o más de las siguientes • La efectividad de la administración de aero-
situaciones puede sugerir la necesidad de la soles en la enfermedad sistémica se evi-
aerosolterapia: dencia por la presencia de la respuesta te-
rapéutica apropiada.
• Inflamación de la vía aérea: estridor, tos • La efectividad de la aerosolterapia medica-
metálica por crup, disfonía postextubación, mentosa se evalúa con la mejoría de uno
diagnóstico de laringotraqueobronquitis o o más de los siguientes parámetros: dis-
crup, radiografía sugestiva de edema de minución del trabajo respiratorio, mejoría
los tejidos blandos y aumento del trabajo de los signos vitales, disminución de la dis-
respiratorio. nea, disminución del estridor, mejoría en
• Para anestesia: dolor severo localizado en la auscultación pulmonar, mejoría de la
la vía aérea superior, instrumentación in- gasimetría arterial, mejoría de la saturación
vasora de la vía aérea superior (broncos- de oxígeno determinada por pulsoximetría
copia). y mejoría del flujo pico con respecto al eva-
• En presencia de enfermedad sistémica luado antes del inicio del tratamiento.
siempre y cuando se requiera la adminis- • Con la administración de solución salina
tración de un agente terapéutico intranasal. hipertónica el resultado deseado se eva-
• En pacientes con signos y síntomas de lúa mediante la obtención de una muestra
broncoespasmo (tos, disnea, sibilancias, de esputo representativa para análisis.

619
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EQUIPO pequeño, presurizados, que al ser activa-


dos proporcionan una dosis exacta de un
Hay cuatro tipos de dispositivos utilizados en medicamento utilizando un vehículo o
la aerosolterapia. Los nebulizadores jet, los propelente (clorofluorocarbonados, CFC).
nebulizadores ultrasónicos, los inhaladores de Hay dispositivos para inhalación nasal y
dosis medida con propelente (IDMp) y los oral. Los propelentes a presión hacen que
inhaladores en polvo seco (IPS). En la Tabla las partículas salgan a una velocidad ini-
1 se describen las ventajas y desventajas de cial de 30 micras/seg lo que favorece que
cada dispositivo. el 80% se impacte en la faringe y sólo el
10 % llegue a depositarse en el epitelio
pulmonar.
NEBULIZADORES
• Espaciadores: están diseñados para me-
Son dispositivos compuesto por un pequeño jorar el rendimiento de los IDMp. No po-
contenedor en donde se aloja el medicamen- seen válvulas unidireccionales. Su propó-
to que es convertido en pequeñas gotas por sito simplemente es aumentar la distancia
un chorro de oxígeno o de aire o por un trans- entre el dispositivo presurizado y la boca
ductor piezoeléctrico de frecuencias ultrasó- del paciente, disminuyendo la velocidad de
nicas. las partículas y el impacto orofaríngeo, con
el fin de evitar los efectos secundarios lo-
El objetivo de la nebulización medicada es cales. Se recomiendan espaciadores con
aportar una dosis terapéutica del medicamen- un volumen alrededor de 750 mL para adul-
to deseado en forma de aerosol, como partí- tos y en niños de 250-300 mL.
culas respirables, durante un breve periodo
de tiempo, usualmente de 5 a 10 minutos. • Aerocámara: es un espaciador que posee
válvulas unidireccionales para contener y
Los tipos de nebulizadores utilizados son: sostener la nube del aerosol hasta que ocu-
rra la inspiración, tiempo que no debe ex-
• Nebulizadores jet (neumáticos): consisten ceder los dos segundos, pues de lo con-
en una cámara de nebulización en la que trario se pierde casi todo el fármaco al ad-
se genera un aerosol mediante un flujo de herirse por cargas electrostáticas a las pa-
gas aportado bien sea por un compresor redes de la aerocámara.
eléctrico o por una fuente de gas compri-
mido (aire u oxígeno). • Inhaladores en polvo seco (IPS): estos
pequeños dispositivos contienen el princi-
• Nebulizadores ultrasónicos: son dispositi- pio activo en forma de polvo y el paciente
vos eléctricos autocontenidos en los que solamente debe realizar una inspiración
se genera un aerosol a partir de la vibra- profunda para inhalar el medicamento. Tie-
ción del líquido colocado en su interior. Pue- nen varias presentaciones: los sistemas
den nebulizar grandes cantidades de unidosis, en los que el medicamento viene
líquidos. en cápsulas que se colocan en el dispositi-
vo y son perforadas antes de su utilización;
• Inhaladores de dosis medida con prope- el sistema multidosis, al cual pertenecen
lente (IDMp): son dispositivos de tamaño los sistemas Turbohaler y Accuhaler.

620
CAPÍTULO XXX: PRINCIPIOS DE INHALOTERAPIA

TABLA 1. EQUIPOS PARA AEROSOLTERAPIA

DISPOSITIVO VENTAJAS DESVENTAJAS


Nebulizador jet • No requiere la coordinación del paciente. • Costoso.
• Se logran altas dosis. • No portátil.
• No libera CFC. • Requiere de una fuente de gas.
• Efectivo con bajos flujos o volúmenes • Es posible la contaminación si la técnica
inspiratorios. de preparación es inadecuada.
• La dosis puede ser modificada. • Requiere la preparación del dispositivo an-
• Están especialmente indicados en situa- tes del tratamiento.
ciones de asma aguda grave. • No todos los medicamentos están dispo-
nibles para nebulizar de esta manera.
• Menos eficiente que otros dispositivos.
Nebulizador ultrasónico • No requiere la coordinación del paciente. • Costoso.
• Se logran altas dosis. • Frágil y poca durabilidad.
• No libera CFC. • Es posible la contaminación.
• Silencioso. • Proclive a funcionar mal.
• Distribución más rápida que el nebulizador • No todos los medicamentos están dispo-
jet. nibles para nebulizar de esta manera.
• No hay pérdida de medicación durante la • Requiere preparación del dispositivo an-
exhalación. tes del tratamiento.
Inhalador de dosis medida • Menos costoso que un nebulizador. • La coordinación mano- inspiración es
con propelente (IDMp) • Portátil y compacto. compleja.
• Más eficiente que un nebulizador. • Requiere colaboración del paciente.
• No requiere la preparación del medica- • Las concentraciones del medicamento
mento. son fijas.
• El tratamiento es corto. • La impactación en la orofaringe es alta.
• Difícilmente se contamina. • Un porcentaje pequeño de pacientes pre-
sentan reacciones al propelente.
• Potencial de abuso.
• Muchos usan CFC.
• No ofrece control de las dosis restantes.
Inhalador de Dosis Medida • El paciente requiere menos coordinación • Es más complejo para el paciente.
(IDM) con espaciador mano-inspiración para el disparo. • Es más costoso que el IDM solo.
• Hay menos impacto del medicamento en • Difícil transporte.
la orofaringe disminuyendo efectos secun-
darios locales.
• Son de elección para administrar medica-
ción broncodilatadora en el tratamiento de
la mayoría de crisis (leves y moderadas).
• Con mascarilla se puede administrar me-
dicamentos inhalados a niños pequeños.
Inhalador en polvo seco (IPS) • No requiere coordinación mano-inspira- • Requiere flujos inspiratorios de modera-
ción para la inhalación. dos a altos, lo que difícilmente se logra
• No requiere contener la respiración. en niños menores, ancianos o durante cri-
• No requiere propelente. sis severas.
• Es activado por la inspiración. • Pueden tener un alto depósito en la faringe.
• No todos los medicamentos están dispo-
nibles para administrar de esta manera.

621
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

GUIA PARA LA SELECCIÓN En situaciones de asma aguda los inhaladores


DEL SISTEMA APROPIADO de dosis medida con espaciador son un trata-
DE AEROSOLTERAPIA miento tan efectivo como los nebulizadores
(recomendación Grado A).
NEBULIZADOR

Se utiliza el nebulizador si el paciente: PROCEDIMIENTOS


• Es incapaz de seguir instrucciones o se
encuentra desorientado. Sólo mediante una adecuada técnica de apli-
• Tiene pobre capacidad inspiratoria. cación se alcanzan los objetivos de la aerosol-
• Es incapaz de contener la respiración. terapia y se minimizan las complicaciones. A
• Está taquipneico (más de 25 respiraciones continuación se describe la técnica de utiliza-
por minuto) o tiene un patrón respiratorio ción de los dispositivos utilizados en la aero-
inestable. solterapia en urgencias. Se incluye la descrip-
ción de los dispositivos en polvo seco, que en
INHALADORES DE DOSIS MEDIDA CON la actualidad se emplean muy poco en los
PROPELENTE (IDMP) servicios de urgencias, pero que en un futuro
cercano se emplearán cada vez más si se
Se utilizan si el paciente: cumple el compromiso internacional (protocolo
• Es capaz de seguir las instrucciones y de- de Montreal) de abandonar completamente la
muestra un correcto uso del dispositivo. fabricación de IDM después del año 2005, con
• Tiene una adecuada capacidad inspiratoria. el fin de disminuir el deterioro de la capa de
• Es capaz de contener la respiración. ozono producida por los clorofluorocarbonos.
• Tiene un patrón respiratorio estable.
INHALADORES DE DOSIS MEDIDA CON
IDMP CON ESPACIADORES PROPELENTE IDMP

Se utilizan si el paciente: En el servicio de urgencias el paciente debe


• Utiliza corticoides inhalados. realizar el procedimiento bajo la supervisión
• Tiene pobre coordinación mano-inspiración directa de la persona encargada de adminis-
en el uso de IDM. trar el medicamento.
• Requiere reducir la pérdida orofaríngea.
Estas son las instrucciones paso a paso que
INHALADOR EN POLVO SECO deben darse al paciente para su correcto uso:

Se utiliza en pacientes: 1. Posición: sentado o de pie.


• Con pobre coordinación mano-inspiración 2. Retire la tapa del inhalador y colóquela en
en el uso del IDM. posición vertical (en forma de L).
• Sensibilidad a los propelentes con CFC. 3. Sujete el inhalador entre los dedos índice
• Capaces de generar flujos inspiratorios al- y pulgar, el índice arriba y el pulgar abajo.
tos (mayores de 60 L/min). 4. Agite vigorosamente el inhalador por 30
• Pacientes que requieren monitorización segundos para obtener una mezcla ho-
precisa del número de dosis. mogénea del fármaco y sus propelentes.
5. Realice una espiración lenta y profunda.

622
CAPÍTULO XXX: PRINCIPIOS DE INHALOTERAPIA

6. Coloque el inhalador entre los dientes y 1. Posición: sentado o de pie.


selle los labios alrededor de la boquilla. 2. Retire la tapa del inhalador y colóquelo en
7. Inspire lentamente por la boca. La lengua posición vertical (en forma de L).
no debe interferir con la entrada del medi- 3. Sujete el inhalador entre los dedos índice
camento. y pulgar, el índice arriba y el pulgar abajo.
8. Tan pronto inicie la inspiración, presione el 4. Agite vigorosamente el inhalador por 30
dispositivo una sola vez y siga inspirando segundos.
lenta y profundamente hasta llenar com- 5. Acople el cartucho al orificio del espaciador.
pletamente los pulmones. 6. Bote todo el aire lentamente.
9. Retire el inhalador de la boca. Sostenga la 7. Coloque el espaciador en la boca, cerrán-
respiración durante 10 segundos. dola a su alrededor.
10.Si se debe administrar una o más dosis del 8. Presione el cartucho una sola vez y tome
mismo inhalador, espere 30 segundos y lentamente el aire por la boca hasta llenar
repita todos los pasos. completamente los pulmones. La lengua no
11. Tape el inhalador y guárdelo en un lugar seco. debe interferir con la entrada del medica-
12. Realice enjuagues bucales con agua des- mento.
pués del uso del inhalador. 9. Sostenga la respiración contando mental-
mente hasta 10.
CUIDADOS DEL INHALADOR 10.Si se debe administrar una o más dosis del
mismo inhalador, espere 30 segundos y
1. Los inhaladores son de uso personal. repita todos los pasos.
2. Guárdelo en un lugar seco y a temperatu- 11.Retire el inhalador del espaciador, tápelo y
ra ambiente. guardarlo en un lugar seco.
3. No lo exponga al fuego.
4. Límpielo frecuentemente con agua y jabón. AEROCÁMARA
5. Recuerde que los inhaladores poseen un
propelente gaseoso que continuará dispa- 1. Tenga en cuenta los pasos anteriores.
rando a pesar de que el medicamento lí- 2. Acople la máscara sobre la cara del pa-
quido se haya terminado. ciente evitando fugas.
6. Si el paciente llega al servicio de urgen- 3. Recuerde que estos dispositivos tienen una
cias con su propio inhalador, verifique el válvula unidireccional que sólo permitirá el
contenido del medicamento. Para esto, re- paso del medicamento con la inspiración.
tire el cartucho del inhalador y colóquelo Si el paciente tiene dificultad para conte-
dentro de un recipiente con agua: si flota, ner la respiración, permita que el paciente
el inhalador está vacío; si adopta una posi- respire a través del dispositivo luego del
ción horizontal quedando la mitad dentro disparo.
del agua y la otra por fuera, es probable
que contenga la mitad de su contenido; si INHALADOR PARA POLVO SECO
se hunde con facilidad, aún esta lleno.
En el mercado existen diferentes formas de
ESPACIADORES dispositivos para polvo seco. A continuación
se describen las instrucciones de uso para los
Estas son las instrucciones paso a paso que más comunes. En el servicio de urgencias el
deben darse al paciente para el uso correcto uso de estos dispositivos debe ser bajo su-
del IDM con espaciadores: pervisión:

623
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Sistema Turbohaler: NEBULIZADORES

1. Desenrosque y retire la tapa blanca que 1. Lávese las manos.


cubre el inhalador. 2. Prepare el equipo
2. Sostenga el inhalador en posición vertical. • Compresor o fuente de oxígeno.
3. Para cargar la dosis, gire la rosca de la • Máscara facial para micronebulización.
parte inferior del inhalador en sentido con- • Conector.
trario al de las manecillas del reloj. Des- • Micronebulizador.
pués gire la rosca en el mismo sentido de • Solución salina al 0,9% (SSN).
las manecillas del reloj; oirá un clic. • Jeringa de 3 mL.
4. Bote todo el aire lentamente. • Medicamento a nebulizar.
5. Coloque la boquilla entre los dientes y cie- 3. Con una jeringa mida 3 mL de solución
rre los labios sobre la misma. salina al 0,9 % y colóquelos en la cámara
6. Tome aire con fuerza, hasta llenar los pul- del micronebulizador. La cantidad de solu-
mones. ción salina se determina teniendo en cuenta
7. Retire la boquilla de la boca y sostenga el las características físicas del medicamen-
aire mientras cuenta mentalmente hasta to (por ejemplo, los antibióticos tienen ma-
diez. yor viscosidad) y el volumen muerto del ne-
8. Bote el aire. Nunca lo haga dentro de la bulizador utilizado. El volumen muerto (lla-
boquilla. mado por otros autores volumen residual)
9. Si se debe repetir una o más dosis de este es el volumen que queda en la cámara del
medicamento, espere por lo menos 30 se- micronebulizador cuando el dispositivo co-
gundos y repita todos los pasos. mienza a “chispotear” y la nube de aerosol
10.Coloque la tapa blanca y guárdelo en un cesa. Suele variar de 0,5 a 1,0 mL. Los
lugar seco. nebulizadores con un volumen muerto me-
nor de 1 mL requieren un volumen inicial
Sistema Accuhaler de 2,0 a 2,5 mL; los nebulizadores con un
volumen muerto mayor a 1 mL requieren
1. Deslice el protector de la pieza bucal. volúmenes iniciales alrededor de 4 mL (re-
2. Para cargar la dosis, pulse el gatillo lateral comendación B).
hacia abajo y hasta el tope 4. Agregue el medicamento utilizando la do-
3. Bote todo el aire lentamente. sis exacta prescrita.
4. Coloque la boquilla entre los dientes y cie- 5. Conecte el nebulizador a la toma de oxí-
rre los labios sobre la misma. geno utilizando un flujo entre 6 y 8 litros/
5. Tome aire con fuerza, hasta llenar los pul- minuto; este es el flujo que habitualmente
mones. se utiliza para nebulizar el 50% de las par-
6. Retire la boquilla de la boca y sostenga el tículas a 2-5 micras de diámetro. El volu-
aire mientras cuenta mentalmente hasta men y el flujo recomendados pueden modi-
diez. ficarse cuando se utilizan medicamentos
7. Si necesita realizarse una o más dosis, como pentamidina o antibióticos debido a
espere mínimo 30 segundos entre cada que sus características físicas y su visco-
toma. sidad son diferentes.
8. Tape la pieza bucal y guárdelo en un lugar 6. Si utiliza un compresor, simplemente en-
seco. ciéndalo.

624
CAPÍTULO XXX: PRINCIPIOS DE INHALOTERAPIA

7. Compruebe que se produce una nube de evita la infección cruzada, no existen estudios
aerosol. que permitan establecer cuantas veces se
8. El paciente debe estar sentado o semi- puede utilizar un nebulizador sin comprome-
sentado. ter su adecuado funcionamiento.
9. Colóquele al paciente la mascarilla o la pie-
za bucal hasta la finalización del medica-
mento. MONITORIZACIÓN
10.Estimule al paciente para que inhale a tra-
vés de la boca usando un patrón lento y El tiempo de seguimiento del paciente se debe
profundo (recomendación B). El patrón res- determinar según la estabilidad y severidad
piratorio afecta la cantidad de aerosol que de la condición clínica.
se deposita en la vía aérea inferior.
11.Al finalizar el medicamento, retire la mas- Es necesario evaluar los siguientes puntos
carilla o la boquilla. antes, durante y después de la aerosolterapia:
12.Limpie y seque el equipo.
13.Suspenda la micronebulización si tiene al- 1. Respuestas subjetivas del paciente como
gún efecto secundario y comuníqueselo al dolor, incomodidad, disnea, inquietud.
médico. 2. Frecuencia y ritmo cardiaco, presión
arterial.
Nota: algunos medicamentos para nebulizar 3. Frecuencia y patrón respiratorio, uso de
no necesitan ser disueltos: verifique esto en músculos accesorios.
las instrucciones de uso de la medicación. 4. Cambio en los indicadores de los efectos
terapéuticos.
Debido a consideraciones de costo, en mu- 5. Color de la piel.
chos sitios se reutilizan nebulizadores que, de 6. Ruidos respiratorios.
acuerdo con las instrucciones del fabricante, 7. Pulsoximetría (si se sospecha hipoxemia).
deberían ser desechables o de uso para un 8. En pacientes con diagnóstico de asma, es
único paciente. En un estudio se encontró que indispensable realizar la medición del flujo
los nebulizadores funcionan bien máximo para espiratorio máximo, antes y después del
100 usos repetidos siempre y cuando se pro- tratamiento. Se deben realizar tres medi-
vea un adecuado mantenimiento (lavarlos con ciones y registrar el mayor valor obtenido.
agua jabonosa, enjuagarlos y secarlos des- 9. Se debe valorar la cantidad de esputo, su
pués de cada uso; además, diariamente cada consistencia, color y olor.
nebulizador debe estar sumergido en ácido
acético durante 30 minutos). En ausencia de
este tipo de mantenimiento, los nebulizadores CONTROL DE INFECCIONES
comienzan a fallar en su funcionamiento a
partir de 40 usos. Dado el riesgo de infección 1. Se deben implementar las precauciones
cruzada, resulta una práctica inadmisible uti- universales para el aislamiento de los flui-
lizar un nebulizador para más de un paciente. dos corporales cada vez que se realice una
En algunas instituciones, con el fin evitar el terapia de este tipo.
riesgo de infección cruzada y poder reutilizar 2. Se deben implementar las recomendacio-
el nebulizador en otro paciente, los nebuliza- nes de los Centros para el Control y Pre-
dores son enviados a esterilizar con gas. Aun- vención de Enfermedades (CDC) sobre
que esta modificación de las recomendaciones precauciones para evitar la diseminación

625
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

nosocomial de infección cuando el pacien- 2. AARC Clinical Practice Guideline. Bland aerosol
te tenga la posibilidad de padecer TBC o administration. Reprinted from: Respir Care 1993;
esté expuesto a factores de riesgo de con- 38:1196-2000.
3. AARC Clinical Practice Guideline. Delivery of
traerla. aerosols to the upper airway. Reprinted from:
3. Los aplicadores para atomizadores multi- Respir Care 1994; 39:803-807.
usos deben ser cambiados entre paciente 4. AARC Clinical Practice Guideline. Selection of a
y paciente. device for delivery of aerosol to the lung parenchy-
4. El personal debe disponer de contenedo- ma. Reprinted from: Respir Care 1996; 41:647-653.
res de basura para desechos contamina- 5. Cates CJ. Holding chambers versus nebulisers for
dos en forma segura. beta-agonist treatment of acute asthma (Cochrane
Review). The Cochrane Library, Issue 4, 1999.
5. Los nebulizadores no pueden ser utiliza- Oxford: Update Software.
dos entre pacientes sin desinfección. 6. Centers for Disease Control. Update: Universal
6. Los nebulizadores deben ser cambiados o precautions for prevention of transmission of
esterilizados concluido un procedimiento human immunodeficiency virus, hepatitis B virus
que no se repite. and other bloodborne pathogens in health-care
7. Los nebulizadores no deben ser enjugados settings. MMWR 1988; 37:377-382, 387-388.
con agua corriente entre tratamientos. 7. Centers for Disease Control and Prevention.
Guideline for the prevention of nosocomial
8. Las soluciones deben ser manipuladas con pneumonia. Respir Care 1994; 39:1191-1236.
técnica aséptica. 8. Dean RH. Nebulizers: principles and performace.
9. Las soluciones que se utilizan como vehí- Respir Care 2000; 45:609- 621.
culo de los medicamentos (por ejemplo 9. Dolovich MA. Consensus Statement: aerosols and
solución salina) deben ser eliminadas des- delivery devices. http//www.rcjournal.com/
pués de 24 horas y deben ser manejadas contents/06.00/06.00.0589.asp. Cosultado el 2/5/
03. 10:11PM.
con técnica aséptica.
10. Member of the British Thoracic Society Nebuliser
Project Group. Nebuliser Guidalines. Thorax 1997;
52:S1-S44.
LECTURAS RECOMENDADAS 11. Rau JL. Respiratory care pharmacology. Fifth
edition. Mosby, St. Louis, 1998.
1. AARC Clinical Practice Guideline Selection of 12. Romero M. Fisioterapia respiratoria. En: Neumo-
Aerosol Delivery Device. Reprinted from: Respir logía. Editado por J Roa, M Bermúdez, R Acero.
Care 1992; 37:891-897. McGra-Hill Interamericana. Bogotá, 2000.

626
CAPÍTULO XXXI: OXIGENOTERAPIA

CAPÍTULO XXXI

Oxigenoterapia

Luisa Fernanda Güell Camacho, Enf.


Especialista en Cuidado Respiratorio.
Coordinadora del Programa de Rehabilitación Pulmonar
Fundación Santa Fe de Bogotá.

INTRODUCCIÓN

E sta guía describe la administración de oxí-


geno en pacientes agudamente enfermos
que se encuentran en un servicio de urgen-
ración percutánea dentro de las siguientes 8-
12 horas asegurando la FiO2 necesaria para
mantener la saturación sobre 90% o más.
cias. Ha sido basada parcialmente en la ex-
celente guía de práctica publicada por la En pacientes con EPOC y agudización se de-
American Association for Respiratory Care be iniciar la oxigenoterapia con bajas concen-
(AARC) y en una amplia revisión bibliográfica traciones de oxígeno y aumentarlas progresi-
tanto internacional como nacional. vamente hasta lograr una saturación alrede-
dor del 90%, vigilando en forma clínica y me-
diante gasimetría el posible aumento de la hi-
DEFINICIÓN DEL PROCEDIMIENTO percapnia. El seguimiento del paciente con
EPOC se realiza con determinación de gases
La oxigenoterapia es la administración de oxí- arteriales en las siguientes dos horas de ini-
geno a concentraciones mayores que las del ciada la oxigenoterapia.
aire ambiente, con la intención de tratar o pre-
venir los síntomas y las manifestaciones de La oxigenoterapia está indicada en las siguien-
la hipoxia. tes situaciones:

• Hipoxemia documentada: hipoxemia se


INDICACIONES define como la disminución de la PaO 2 por
debajo del rango normal. A nivel del mar,
Cuando un paciente ingresa al servicio de ur- el valor normal de la PaO2 es de 90 mmHg
gencias con dificultad respiratoria y signos de + 10, y, a 2.640 metros sobre el nivel del
hipoxemia, inmediatamente se inicia oxígeno mar, el valor normal de la PaO2 es de 63 +
y, de manera simultánea, se mide la satura- 3. Se debe iniciar oxígeno en cualquier
ción de oxígeno y se realizan gases arteriales. persona con saturación arterial de oxíge-
no (SaO2) menor de 90 %.
En pacientes agudos, sin antecedentes de • En una situación aguda en que se sospe-
enfermedad respiratoria crónica, se inicia la cha hipoxemia: en tal caso, se requiere con-
oxigenoterapia con FiO2 elevadas (FiO2 de 0,5 firmarla en un período apropiado de tiem-
o más) y monitoreo del paciente con la satu- po después del inicio de la terapia.

627
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Traumatismo severo. • Disminución del gasto cardiaco.


• Infarto agudo de miocardio o angina ines- • Cortocircuito intracardiaco de derecha-iz-
table. quierda.
• Terapia a corto plazo o intervención quirúr- • Shock.
gica (por ejemplo recuperación pos anes- • Hipovolemia.
tesia). • Disminución de la hemoglobina o alteración
química de la molécula.
Además de evaluar la indicación de la oxigeno-
terapia es importante determinar el origen de Otras indicaciones de oxigenoterapia en ur-
la hipoxemia, y de esta manera, complementar gencias son:
el manejo con la corrección de la causa. En la
práctica es casi imposible establecer la cau- Insuficiencia respiratoria crónica agudizada,
sa de la hipoxemia sólo con los gases arteria- crisis asmática, obstrucción de vía aérea supe-
les; sin embargo, una adecuada evaluación rior, compromiso neuromuscular, oxigenote-
clínica y la presencia de enfermedades espe- rapia previa por tiempo indefinido (EPOC, fi-
cíficas pueden orientar la toma de decisiones. brosis pulmonar, falla cardiaca), intoxicación
por monóxido de carbono e intoxicación por
Las principales causas de hipoxemia de ori- cianuro.
gen respiratorio son las siguientes:

• Alteración en la relación ventilación/perfu- CONTRAINDICACIONES


sión. Es la causa más frecuente de hipoxe-
mia en enfermedades pulmonares como No existen contraindicaciones específicas
asma, neumonía, atelectasia, bronquitis y para la oxigenoterapia cuando las indicacio-
enfisema. nes han sido confirmadas.
• Hipoventilación alveolar; además de hipo-
xemia se observa elevación de la PaCO 2 .
• Trastornos en la difusión; rara vez causan PRECAUCIONES Y POSIBLES
hipoxemia en reposo. COMPLICACIONES
• Aumento del cortocircuito intrapulmonar;
puede ocurrir por alteración en el parén- El oxígeno, como cualquier medicamento,
quima pulmonar como en el SDRA. debe ser administrado en las dosis y por el
• Aumento del espacio muerto. tiempo requerido, con base en la condición
clínica del paciente y, en lo posible, fundamen-
Las causas más frecuentes de hipoxemia de tado en la medición de los gases arteriales.
origen no respiratorio son las siguientes: Se deben tener en cuenta las siguientes pre-
cauciones:
• Disminución de la presión parcial (tensión)
del oxígeno o de la cantidad de oxígeno • Los pacientes con hipercapnia crónica
en el gas inspirado. Ocurre en las grandes (PaCO2 mayor o igual a 44 mmHg a nivel
alturas (baja presión parcial) o al inspirar del mar y mayor o igual a 35 mmHg a nivel
mezclas de gases inertes como propano de Bogotá) pueden presentar depresión
(baja cantidad). El aire ambiente que se ventilatoria si reciben concentraciones al-
respira normalmente contiene 21% de oxí- tas de oxígeno; por lo tanto, en estos pa-
geno. cientes está indicada la administración de

628
CAPÍTULO XXXI: OXIGENOTERAPIA

oxígeno a concentraciones bajas (no ma- Para determinar la presencia de hipoxemia se


yores de 30%). En pacientes con EPOC, debe realizar una gasimetría arterial. Ésta per-
hipercápnicos e hipoxémicos crónicos, el mite no sólo la medición de la PaO 2, sino tam-
objetivo es corregir la hipoxemia (PaO 2 por bién, de la PaCO2 y el cálculo de la D(A-a)O2,
encima de 60 mmHg y saturación mayor datos que ayudan a determinar la causa de la
de 90%) sin aumentar de manera signifi- hipoxemia.
cativa la hipercapnia.
• Con FiO2 mayor o igual a 0,5 (50%) se pue- La pulsoximetría puede ser útil en algunas cir-
de presentar atelectasia de absorción, toxi- cunstancias; sin embargo, si se sospecha hi-
cidad por oxígeno y depresión de la fun- percapnia es mejor realizar gasimetría arterial
ción ciliar y leucocitaria. para evitar una mayor retención de CO 2 con
• En prematuros debe evitarse llegar a una la oxigenoterapia guiada sólo por este méto-
PaO2 de más 80 mmHg, por la posibilidad do no invasor.
de retinopatía.
• En niños con malformación cardiaca ducto-
dependiente el incremento en la PaO 2 pue- LIMITACIONES
de contribuir al cierre o constricción del DEL PROCEDIMIENTO
conducto arterioso.
• El oxígeno suplementario debe ser admi- Los beneficios de la oxigenoterapia en el tra-
nistrado con cuidado en intoxicación por pa- tamiento de hipoxia secundaria a anemia o a
raquat y en pacientes que reciben bleo- alteraciones circulatorias (shock hipovolémico,
micina. shock séptico) son limitados en la medida en
• Durante broncoscopia con láser, se deben que, a pesar de ser la oxigenoterapia indispen-
usar mínimos niveles de oxígeno suple- sable, su empleo no consigue revertir la hipo-
mentario por el riesgo de ignición intratra- xia tisular a menos que se pongan en marcha
queal. simultáneamente los tratamientos específicos
• El peligro de un incendio aumenta en pre- de las alteraciones señaladas.
sencia de concentraciones altas de oxíge- En los casos en los que está indicado el sopor-
no. Todo servicio de urgencias debe tener te ventilatorio, la oxigenoterapia no debe ser
a mano extintores de fuego. usada en lugar de la ventilación mecánica.
• Otro posible riesgo es la contaminación
bacteriana asociada con ciertos sistemas
de nebulización y humidificación. EQUIPOS
Existen dos sistemas para la administración
EVALUACIÓN DE LA NECESIDAD de oxígeno: los sistemas de bajo flujo y los
sistemas de alto flujo.
La necesidad de oxigenoterapia se determi-
na por la presencia de una inadecuada pre-
sión parcial de oxígeno en la sangre arterial o SISTEMAS DE BAJO FLUJO
por una baja saturación, determinados por mé-
todos invasores o no invasores o por la pre- Estos sistemas suministran oxígeno puro
sencia de alguno de los indicadores clínicos (100%) a un flujo menor que el flujo inspiratorio
anteriormente descritos. del paciente. El oxígeno administrado se mez-
cla con el aire inspirado y, como resultado, se

629
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

obtiene una concentración de oxígeno inha- evitar la reinhalación de CO 2 secundario al


lado (FiO2) variable, alta o baja, dependiendo acúmulo de aire espirado en la máscara. Se
del dispositivo utilizado y del volumen de aire deben tomar precauciones cuando se utiliza
inspirado por el paciente. Es el sistema de una máscara simple, pues, su empleo a largo
elección si la frecuencia respiratoria es menor plazo puede ocasionar irritación en la piel y
de 25 respiraciones por minuto y el patrón res- úlceras de presión. Durante el periodo de ali-
piratorio es estable, de lo contrario, el siste- mentación el paciente debe utilizar cánula de
ma de elección es un dispositivo de alto flujo. oxígeno para evitar hipoxemia.

CÁNULA NASAL MÁSCARA DE REINHALACIÓN PARCIAL


(MÁSCARA CON RESERVORIO)
Puede suministrar una FiO 2 de 0,24-0,40
(24%-40%) de oxígeno a un flujo de hasta 6 Es una máscara simple con una bolsa o
litros por minuto en adultos (dependiendo del reservorio en su extremo inferior; el flujo de
patrón ventilatorio). En recién nacidos y en oxígeno debe ser siempre suficiente para
niños el flujo se debe limitar a máximo 2 litros/ mantener la bolsa inflada. A un flujo de 6 a 10
minuto. litros por minuto puede aportar una FiO 2 de
0,4-0,7 (40%-70%). Las máscaras de no rein-
Los consensos sobre oxigenoterapia estable- halación de oxígeno son similares a las más-
cen que el oxígeno suministrado a los adultos caras de reinhalación parcial, excepto, por la
por cánula nasal con cantidades de flujo me- presencia de una válvula unidireccional entre
nor o igual a 4 litros por minuto no necesita la bolsa y la máscara que evita que el aire
ser humidificado; sin embargo, es común ob- espirado retorne a la bolsa. Las máscaras de
servar en servicios de urgencias y hospitali- no reinhalación deben tener un flujo mínimo
zación la utilización de humidificación. Si la de 10 litros por minuto y aportan una FiO 2 de
institución establece por protocolo la humidi- 0,6-0,8 (60%-80%).
ficación de todos los gases inhalados, asimis-
mo, debe establecer los mecanismos de se- CÁNULA TRANSTRAQUEAL
guimiento, manejo y cambio de las solucio-
nes de humidificación utilizadas con el fin de Los pacientes que reciben oxígeno por cánu-
evitar contaminación. la transtraqueal (pequeñas cánulas transtra-
queales diseñadas para oxigenoterapia domi-
No se aconseja la utilización de cánula cuan- ciliaria), pueden continuar recibiendo oxígeno
do son necesarios flujos superiores a 6 litros por este método al llegar a urgencias si no
por minuto, debido a que el flujo rápido de hay problemas adicionales. Si se presentan
oxígeno ocasiona resequedad e irritación de dificultades relacionadas con la ruta de admi-
las fosas nasales y no aumenta la concentra- nistración transtraqueal, la oxigenación debe
ción del oxígeno inspirado. ser asegurada por otros medios.

MÁSCARA DE OXÍGENO SIMPLE


SISTEMAS DE ALTO FLUJO
Puede suministrar una FiO 2 de 0,35-0,50
(35%-50%) de oxígeno con flujos de 5-10 li- Los sistemas de alto flujo aportan mezclas
tros por minuto. Es necesario mantener un flu- preestablecidas de gas con FiO2 altas o bajas
jo mínimo de 5 litros por minuto con el fin de a velocidades de flujo que exceden las deman-

630
CAPÍTULO XXXI: OXIGENOTERAPIA

das del paciente, es decir, el flujo total de gas CAMPANA DE OXÍGENO


que suministra el equipo es suficiente para pro-
porcionar la totalidad del gas inspirado. Los Es una campana cerrada y compacta que se
dispositivos de alto flujo utilizan el sistema Ven- utiliza en lactantes. Proporciona un alto gra-
turi con base en el principio de Bernuolli, en el do de humedad y funciona como un sistema
cual, el equipo mezcla en forma estandarizada de alto flujo si se conecta a un sistema Venturi.
el oxígeno con el aire ambiente a través de ori- Es indispensable utilizarla con un nebulizador.
ficios de diferente diámetro. Proporciona FiO 2 Tiene como desventajas la dificultad para ali-
conocidas entre 24 y 50% (Tabla 1). mentar el lactante y la dificultad para su apli-
cación en niños activos. Se recomienda elimi-
Las máscaras de traqueostomía, los adapta- nar la condensación acumulada en los tubos
dores de tubo en T para tubos endotraqueales por lo menos cada dos horas y, si se utiliza
y las tiendas faciales, funcionan como siste- calentador, asegurar una temperatura de 34,5-
mas de oxígeno suplementario de alto flujo si 35,6ºC en el interior de la cámara con contro-
se conectan a un sistema Venturi. Requieren les cada 4 horas.
humidificadores de aerosol (micronebulizado)
o humidificadores de cascada o reservorios. TIENDA FACIAL

MASCARILLA VENTURI La tienda facial funciona como un sistema de


alto flujo cuando se acopla a un nebulizador
Suministra una concentración exacta de oxí- Venturi. Es útil en pacientes que no toleran la
geno independientemente del patrón respira- mascarilla facial o en caso de traumatismo fa-
torio del paciente. Puede producir en el pacien- cial. Es poco práctica para tratamiento a lar-
te sensación de confinamiento, calor e inclusi- go plazo, debido a que, en algunos pacientes
ve irritar la piel. Impide al paciente comer y produce sensación de calor y de confinamien-
hablar. La concentración de oxígeno puede to. El riesgo de reinhalación de CO 2 disminu-
variar si no se ajusta adecuadamente la mas- ye cuando la máscara se acopla a un sistema
carilla, si se angulan los tubos conectores, si Venturi.
se bloquean los orificios de entrada de la mas-
carilla o si se aplica un flujo de oxígeno infe- COLLAR O MASCARILLA DE TRAQUEOSTOMÍA
rior al recomendado.
Proporciona un alto grado de humedad. Debe
TUBO EN T eliminarse la condensación acumulada, por lo
menos cada dos horas, con el propósito de
El tubo en T proporciona un alto grado de hu- evitar el drenaje hacia la traqueostomía. La
medad; se utiliza en tubos endotraqueales. La mascarilla debe ser limpiada cada cuatro ho-
extensión en chimenea funciona como un sis- ras con agua, puesto que, las secreciones
tema de recirculación parcial y, por lo tanto, acumuladas producen infección en el estoma.
debe mantenerse colocada; de lo contrario, El orificio frontal de la máscara permite la as-
se disminuye en forma significativa la FiO 2. piración de secreciones y no debe ser ocluido.
Se recomientda evitar el uso de aerosoles
calientes en traqueostomías recientes por el
riesgo de causar hemorragias.

631
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. FRACCIÓN INSPIRADA DE OXÍGENO CON DISPOSITIVOS DE BAJO Y ALTO FLUJO

SISTEMAS DE BAJO FLUJO


DISPOSITIVO Flujo en L/min FiO2 (%)
Cánula nasal 1 24
2 28
3 32
4 36
5 40
Máscara de oxígeno simple 5-6 40
6-7 50
7-8 60
Máscara de reinhalación parcial 6 60
7 70
8 80
9 90
10 99
Máscara de no reinhalación 4-10 60-100
SISTEMAS DE ALTO FLUJO
Máscara de Venturi(Verificar el flujo en l / min. Según indicaciones del fabricante). 3 24
6 28
9 35
12 40
15 50

FRECUENCIA (PaO2) o de la saturación de oxígeno debe


hacerse con la siguiente periodicidad:
La oxigenoterapia debe ser administrada de - Al inicio de la terapia.
manera continua, a menos que se haya demos- - Dentro de las 12 horas de inicio con una
trado que la necesidad de oxígeno está limitada FiO2 menor de 0,40 (40%).
a situaciones específicas (dormir por ejemplo). - Dentro de las 8 horas de iniciación con
una FiO2 mayor o igual a 0,40 (40%), in-
cluyendo recuperación post- anestésica.
MONITORIZACIÓN - Dentro de las siguientes 72 horas en in-
farto agudo de miocardio.
MONITORIZACIÓN DEL PACIENTE - Dentro de las siguientes 2 horas en el pa-
ciente cuyo diagnóstico principal es EPOC.
• La evaluación clínica incluye el estado car- - Dentro de la primera hora en el neonato.
diaco, pulmonar y neurológico.
• Evaluación de parámetros fisiológicos. La Se debe considerar la necesidad de realizar
medición de la presión arterial de oxígeno ajustes en la FiO 2 en los pacientes que

632
CAPÍTULO XXXI: OXIGENOTERAPIA

incrementan el nivel de actividad (baño, des- Se recomienda vigilar el posible empeora-


plazamientos, etc.). miento de la PaCO2 durante la oxigenoterapia
en los siguientes pacientes:
MONITORIZACIÓN DEL EQUIPO
• Pacientes con antecedente de retención de
• Todos los sistemas de administración de CO2 en hospitalizaciones anteriores.
oxígeno tienen que ser evaluados por lo • Pacientes con EPOC que presentan em-
menos una vez al día. peoramiento súbito de la hipoxemia.
• Es necesario realizar evaluaciones más • Pacientes que correspondan al estereoti-
frecuentes con analizadores calibrados a po del “abotagado azul”, con hipoxemia y
algunos sistemas de administración de oxí- cor pulmonale pero con disnea leve.
geno: • Pacientes sin diagnóstico previo en quie-
- Sistemas susceptibles de variación en nes la hipoxemia aguda se acompaña de
la concentración de oxígeno (ej: siste- hipersomnolencia.
mas mezcladores de alto flujo).
- Sistemas de oxigenoterapia aplicados a
pacientes con vía aérea artificial. CONTROL DE LA INFECCIÓN
- Sistemas que suministran mezclas de
gas precalentado. Bajo circunstancias normales los sistemas de
- En pacientes que están clínicamente oxígeno de flujo bajo (incluyendo cánulas y
inestables o que requieren FiO2 >0,50. máscara simples) no representan riesgos clí-
- Evitar la interrupción de la oxigenotera- nicamente importantes de infección, siempre
pia en situaciones como la deambula- y cuando se usen en el mismo paciente, y no
ción o el transporte para procedimientos. necesitan ser reemplazados rutinariamente.
Los sistemas de alto flujo que emplean humi-
dificadores precalentados y generadores de
EVALUACIÓN DE RESULTADOS aerosol, especialmente cuando son aplicados
a personas con vía aérea artificial, generan
Los resultados se evalúan mediante una va- un importante riesgo de infección. Ante la au-
loración clínica y fisiológica que establezca sencia de estudios definitivos sobre los inter-
una adecuada respuesta del paciente a la te- valos de cambio de los equipos la guía de la
rapia. Después de iniciada la oxigenoterapia American Association for Respiratory Care
se debe evaluar periódicamente los beneficios (AARC) recomienda establecer la frecuencia
clínicos, la corrección de la hipoxemia y la pre- de cambio de los equipos de acuerdo con los
sencia de efectos deletéreos. resultados obtenidos por el comité de infeccio-
nes en cada institución. En forma general, se
En los pacientes con EPOC agudizado se re- recomienda hacerlo cada 2-3 días.
quieren 20 a 30 minutos para llegar a una si-
tuación de estabilidad luego de cualquier cam-
bio en la FiO2. Por esta razón, las pulsoxime- LECTURAS RECOMENDADAS
trías realizadas antes de este lapso de tiem-
po pueden dar información errónea que con- 1. American Academy of Pediatrics, American
duce a decisiones inadecuadas. College of Obstetricians and Gynecologists.
Guidelines for perinatal care. Second edition.
Washintong,1988.

633
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. American Association for Respiratory Care 15. Hanson CW 3rd, Marshall BE, Frasch HF, et al.
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therapy for adults in the acute care facility. Respir patients with chronic obstructive pulmonary
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634
CAPÍTULO I: CETOACIDOSIS DIABÉTICA

CAPÍTULO I

Cetoacidosis diabética

Fernando Lizcano, MD, PhD


Profesor Asociado, Facultad de Medicina, Universidad de La Sabana
Endocrinólogo Asociado Fundación Cardio-Infantil
Bogotá

CONCEPTOS GENERALES EPIDEMIOLOGÍA

L a cetoacidosis diabética (CAD) es un tras-


torno metabólico ocasionado por la ausen-
cia absoluta o relativa de la hormona anabólica
En los últimos años la morbimortalidad de la
CAD ha disminuido de manera importante. Su
incidencia oscila entre 1% y 10%, aunque es
insulina. Es la causa más importante de mor- muy variable en las series publicadas. En el
bilidad y mortalidad en los niños que presentan estudio EURODIAB, los pacientes que acudie-
diabetes mellitus, por lo cual el reconocimiento ron a los servicios de urgencias por este moti-
temprano de sus manifestaciones es esencial vo representaron el 8,6% del total de casos
para evitar las complicaciones asociadas con atendidos, el número de ingresos es más bajo,
esta patología. 60 por 1.000 diabéticos en los Estados Uni-
dos. La tasa de mortalidad de la CAD varía
La insulina es la hormona clave para la regu- entre 2% y 5%, aunque en ausencia de insuli-
lación de la glucosa sanguinea, y sus funcio- na la mortalidad es de 100%. La tasa de morta-
nes incluyen la captación de la glucosa, su lidad se relaciona con la edad, con falla o retra-
transporte intracelular y el aumento de los de- so en el diagnóstico, con las complicaciones
pósitos de glicógeno y de grasa. Cuando se asociadas al tratamiento, tales como trastor-
presenta un déficit de insulina, se induce una nos electrolíticos (fundamentalmente del pota-
respuesta exagerada al ayuno, que incluye sio) y con factores desencadenantes como la
aumento de la producción de glucosa por el sepsis.
hígado mediante lisis de glucógeno y gluco-
neogénesis desde los depósitos de proteínas
y grasas. Además, durante el déficit de insulina PRESENTACIÓN DE LA CAD
la captación periférica de glucosa se ve dis-
minuida y los niveles de hormonas contraregu- Las manifestaciones clínicas de la CAD son
ladoras se incrementan (glucagón, cortisol, consecuencia de las rápidas alteraciones fun-
hormona de crecimiento y catecolaminas), lo cionales que ocurren en el metabolismo ener-
cual induce los cambios metabólicos que ca- gético. La hiperglucemia produce aumento de
racterizan el cuadro de CAD. la diuresis, con pérdida de 3-10% del peso cor-
poral. Contribuyen a este cuadro de deshi-
dratación la hiperventilación y el vómito. La
ausencia de insulina y la acción antagonista
del cortisol y la hormona de crecimiento,

637
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

aumentan los niveles de ácidos grasos libres, SÍNTOMAS


los cuales son oxidados en el hígado para pro-
ducir cuerpos cetónicos, beta-hidroxibutrato y 1. Síntomas de hiperglucemia:
acetoacetato, lo cual lleva a acidosis metabó- • Poliuria.
lica. La hiperventilación, consecuencia de la aci- • Polidipsia.
dosis, no es suficiente para compensar la aci- • Pérdida de peso.
dosis metabólica, que junto con la deshidrata- • Dolor muscular y calambres.
ción inducen falla renal y colapso circulatorio.
2. Síntomas de acidosis y deshidratación:
Cuando la CAD se presenta como manifesta- • Dolor abdominal.
ción inicial de la diabetes mellitus (DM), usual- • Hiperventilación.
mente los síntomas aparecen en forma insidio- • Confusión y coma.
sa durante varios días, con deshidratación (se
manifiesta pérdida aguda de peso) y cetosis. 3. Otros síntomas:
Los síntomas de la enfermedad desencade- • Vómito.
nante son igualmente manifiestos (infección • Proceso intercurrente (Infección del
respiratoria o urinaria). tracto respiratorio y urinario).
• Astenia y malestar general.
La aparición de CAD puede ser aguda en el
caso de un paciente con DM ya establecida,
cuando por olvido o en forma deliberada ha Signos en la CAD
omitido la aplicación de insulina. En estos ca-
sos, si el control de la glucemia se ha reaIizado 1. Deshidratación: algunos signos pueden de-
en forma estricta, la CAD puede presentarse terminar el porcentaje de peso corporal que
con cifras de glucemias no muy elevadas, del puede ser correlacionado con el promedio
orden de 250 mg/dL. de déficit de líquidos.

Leve < 3% Moderado 3-10% Severa 10%, shock 15%


Apariencia Alerta, polidipsia Letargia, polidipsia Somnoliento, frío
Turgencia de piel Normal Ausente Ausente
Mucosas Húmedas Secas Muy secas
Presión arterial Normal— Normal o baja Baja para la edad
Pulso Normal Acelerado Acelerado y débil
Ojos Normal Hundidos Muy hundidos
Fontanelas Normal Hundidos Muy hundidos

2. Acidosis ETIOLOGÍA
• Respiración con olor a cetona (manzana).
• Dolor abdominal a la palpación. • En 25% de los pacientes la manifestación
• Coma, que puede estar presente en inicial de la DM tipo I es un cuadro de CAD.
10% de los casos. • Infección del tracto respiratorio o urinario.
• Respiración de Kussmaul (hiperven- • Falla en la administración de las dosis ade-
tilación). cuadas de Insulina.

638
CAPÍTULO I: CETOACIDOSIS DIABÉTICA

• Alteraciones emocionales y mala adapta- Uroanálisis: sirve para descartar la presen-


ción a la diabetes. cia de infección, si se hallan bacterias u hon-
• Alcohol o abuso de medicaciones como las gos se procede con urocultivo. Es un buen
anfetaminas. indicador de los niveles de cetonas y glucemia
del organismo.

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Fosfato, Calcio y Magnesio: estos electroli-


tos se ven invariablemente disminuidos, pero
• Acidosis metabólica de otro origen. carecen de una clara significancia clínica.
• Acidosis respiratoria.
• Asma.
• Hipocalemia. ESTUDIOS IMAGENOLÓGICOS
• Neumonía.
• Intoxicación por salicilatos. Radiografía de tórax: es importante para
descartar infección respiratoria y para deter-
minar el estado de los pulmones y el tamaño
ESTUDIOS DE LABORATORIO del corazón, entre otras.

Glucosa sanguínea: su determinación debe TAC cerebral: se debe ordenar en presencia


efectuarse con una frecuencia de al menos de coma o ante la sospecha de edema
una vez cada hora. cerebral.

Gases arteriales: en casos de CAD moderada


o severa, el pH puede ser menor de 7,2. Los ELECTROCARDIOGRAMA
niveles de bicarbonato reflejan el grado de la
acidosis. Es importante para la monitoría de los los ni-
veles sanguíneos de potasio.
Potasio: inicialmente los niveles de potasio
son normales o altos a pesar de un considera- 1. Cambios característicos de hipokalemia:
ble déficit del contenido corporal de potasio. • Depresión de segmento ST.
Esto se debe a que la acidosis saca el potasio • Onda T plana o bifásica.
de las células. La insulina lleva el potasio de • Onda U prominente.
nuevo al espacio intracelular, hecho que pue- 2. Cambios característicos de hiperkalemia:
de disminuir los niveles sanguíneos rápida- • Ondas T picudas.
mente. Durante las primeras horas de instau- • Complejo QRS ancho.
rado el tratamiento es mandatario determinar • Desaparición de ondas P.
los niveles de potasio en forma horaria. Es
también importante la monitoría con electro-
cardiograma. TRATAMIENTO
Sodio: el sodio se encuentra bajo, debido al Al igual que en todos los casos críticos, lo pri-
efecto dilucional de la hiperglucemia. mero es ejecutar el ABC de la resucitación,
especialmente si el paciente se encuentra en
Hemograma: usualmente se observa leucoci- shock o está en coma.
tosis, incluso en ausencia de infección.

639
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PROCEDIMIENTOS Una vez los niveles de glucemia han descen-


dido a menos de 250 mg/dL, se cambian los
• Insertar una buena línea venosa con aguja líquidos por DAD 5% y se continúa con estos
calibre 20 o 18 para el aporte rápido de fluidos hasta que la vía oral se haya restable-
líquidos e insulina. Puede instalarse otra cido.
línea venosa para la toma de muestras.
• Insertar una sonda nasogástrica si el pa- TERAPIA DE INSULINA
ciente está inconsciente o hay vómito.
• En pacientes con pérdida de la conciencia Se utiliza insulina cristalina administrada por
es conveniente poner una sonda uretral vía endovenosa. En pacientes cuyo diagnós-
para cuantificar la diuresis. tico de DM se efectuó a raíz del cuadro de
CAD, se puede realizar un cálculo de admi-
REMPLAZO DE LÍQUIDOS nistración de insulina de 0,1U/kg/h. En pacien-
tes con DM ya establecida se puede adminis-
No existe un consenso sobre el tipo de líquidos trar insulina a razón de 0,2 o 0,3U/kg/h. Es
que debe administrarse inicialmente. Los me- importante tener en cuenta que la reducción
jores resultados han sido obtenidos con solu- de los niveles de glucemia debe ser en pro-
ción isotónica de cloruro de sodio al 0,9%. medio de 100mg/mL/h.

Los siguientes son lineamientos generales que La infusión de insulina debe continuar, previ-
deben ser modificados si las condiciones de niendo siempre la hipoglucemia. La infusión
pérdida de líquidos permanecen; es imperati- puede ser suspendida 30 minutos después de
vo evaluar el balance hídrico cada hora. haber iniciado la administración subcutánea
de Insulina.
En los niños, si existe acidosis severa y com-
promiso circulatorio se pueden administrar 10- PROVISIÓN DE ELECTROLITOS
20 mL/kg de solución salina normal (NaCl)
0,9% durante los primeros 30 minutos. En el Potasio: los pacientes con CAD siempre ex-
adulto se puede administrar un litro de solución hiben un déficit total de potasio. Los niveles
salina normal (NaCl) 0,9% en la primera hora. séricos iniciales pueden ser normales o eleva-
Se puede realizar reemplazo de la mitad del dos. Se pueden seguir los parámetros de la
déficit hídrico durante las primeras 6 horas, y siguiente tabla para el reemplazo de potasio.
el resto se puede remplazar durante 24 horas.

Potasio sérico (mEq/L) Infusión de potasio (KCl)


<2,5 mEq/L 1 mEq/kg durante una hora
2,5-3,5 mEq/L 40 mEq/L
3,5-5 mEq/L 20 mEq/L
5-6 mEq/L 10 mEq/L
>6 mEq/L Detener infusión y repetir en 2 hrs.

640
CAPÍTULO I: CETOACIDOSIS DIABÉTICA

Bicarbonato: en general no es aconsejable REMISIÓN DE LOS PACIENTES


administrar bicarbonato; se puede considerar su
administración cuando el pH desciende a 7,0. Si el nivel de pH es inferior a 7,1 ó el paciente
se encuentra en coma, es conveniente que
sea tratado en la unidad de cuidados intensi-
COMPLICACIONES vos. Si el paciente tiene signos de edema ce-
rebral es conveniente remitirlo a un neurociru-
Edema Cerebral: es la complicación más im- jano o a la UCI.
portante de la CAD. El riesgo de edema cere-
bral es de 0,4% en los pacientes con DM ya
establecida y de 1,2% en los casos nuevos. La LECTURAS RECOMENDADAS
tasa de mortalidad es de 25-30% y el déficit neu-
rológico se presenta en 35% de los casos. Las 1. Curtis JRT, Muirhead MS, Cummings E, et al.
causas no son del todo claras; depende de la Recent Trends in Hospitalization for Diabetic
velocidad de la corrección del déficit hídrico, del Ketoacidosis in Ontario Children. Diabetes Care
nivel de glucemia inicial y del tiempo de correc- 2002; 25:1591-1596.
2. Efstathiou SP, Tsiakou AG, Tsioulos DI, et al. A
ción de la hiperosmolaridad. Es importante la
mortality prediction model in diabetic ketoacidosis.
evaluación neurológica frecuente para detectar
Clin Endocrinol 2002; 57:595-601.
la aparición de signos como cefalea intensa, con- 3. George AK, Shih A, Regan TJ. Effect of acute
fusión, deterioro del estado de conciencia, vó- ketoacidosis on the myocardium in diabetes. Am
mito, dilatación pupilar, papiledema, respiración J Med Sci 1996; 311:61-64.
irregular y disminución del pulso. 4. Glaser N, Barnett P, McCaslin I, et al. Risk factors
for cerebral edema in children with diabetic
Síndrome de dificultad respiratoria del ketoacidosis. N Engl J Med 2001; 344:264-269.
adulto (SDRA): se da en pacientes jóvenes. 5. Javor KA, Kotsanos JG, McDonald RC, et al.
La taquipnea y la cianosis son los síntomas Diabetic ketoacidosis charges relative to medical
guías; cursa con hipoxia, infiltrados difusos y charges of adult patients with type I diabetes. Dia-
betes Care 1997; 20:349-354.
bilaterales en la radiografía de tórax, pero su
6. Maya L. Cetoacidosis diabética. Pediatría 1998;
detección precoz se hace mediante la medi-
33:66-79.
ción de gases arteriales. Precisa tratamiento 7. Moreneo S, Pavon I, Vega B, et al. Complicacio-
en una unidad de cuidados intensivos y su nes de la diabetes mellitus: impacto sobre los cos-
pronóstico es reservado. tes hospitalarios. Endocrinología 1999; 46: 55-59.
8. Stephenson J, Fuller JH Eurodiab IDDM. Compli-
Otras complicaciones: complicaciones trom- cations Study Group. Microvascular and acute
boembólicas, edema agudo del pulmón, alca- complications in IDDM patients: The Eruodiab
losis metabólica, acidosis láctica, neumo-me- IDDM Complications Study Group. Diabetología
diastino y necrosis gástrica. 1994; 37: 278-285.

641
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO II

Coma hiperosmolar

William Kattah, MD
Jefe, Sección de Endocrinología
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L as complicaciones hiperglucémicas agu-


das de la diabetes más frecuentes son: la
cetoacidosis diabética (CD) y el estado hipe-
insulina y el desarrollo de infecciones son las
más relevantes.

rosomolar no cetósico (EH no C).


CUADRO CLÍNICO
La CD y el EH no C representan trastornos
metabólicos asociados con el déficit parcial Los pacientes con EH no C presentan estados
de insulina en el caso del EH no C, o con défi- de deshidratación profundos y niveles de os-
cit total en el caso de la CD. Ambos síndromes molaridad más altos. La respiración acidótica
se acompañan de aumento en la osmolaridad: no es común, y cuando se presenta, obedece
leve en la CD y moderada a severa en el EH a un estado intermedio entre CA y EH no C o
no C. Se observa deshidratación asociada, a la presencia de acidosis láctica. Numerosos
que es más marcada en el EH no C, y altera- fármacos son precipitantes de esta condición:
ciones de conciencia que van desde la obnu- glucocorticoides, beta-adrenérgicos, simpati-
bilación mental hasta profundos estados co- comiméticos, fenitoína, diuréticos tiazídicos y
matosos, cuyo desarrollo es progresivo. En el furosemida son los más comunes. El alcohol
caso de la CD oscila entre 24-48 horas y en el y la cocaína son tóxicos que también pueden
EH no C hasta una semana. precipitarlo.

EPIDEMIOLOGÍA EXÁMENES DE LABORATORIO


La mortalidad del EH no C oscila entre 15% y Los exámenes que inicialmente están indica-
70%, y se explica por el mayor promedio de edad dos son:
de los pacientes y por las condiciones clínicas
asociadas, como sepsis, neumonía, infarto agu- • Glucemia.
do de miocardio e insuficiencia renal aguda. • Sodio.
• Potasio.
Las causas precipitantes aparecen en el flujo- • Creatinina sérica.
grama. En nuestro medio la suspensión de la • Nitrógeno ureico.

642
CAPÍTULO II: COMA HIPEROSMOLAR

• Gases arteriales. aquellos con un alto riesgo de broncoaspi-


• Cetonas séricas y urinarias. ración.
• Uroanálisis.
• Hemograma. La hidratación en los pacientes con EH no C
puede requerir 48-72 horas. Una vez recupe-
Otros exámenes complementarios quedan a rado el volumen intravascular, la infusión hí-
discreción del médico en cada caso particular. drica puede ser más lenta en atención a las
condiciones cardiovasculares que pueden es-
tar asociadas y que podrían dar lugar a edema
TRATAMIENTO pulmonar. El uso de solución salina al 0,5%
en pacientes con concentraciones de sodio
Se ha demostrado que tanto la morbilidad co- muy altas (>150 mOsm/L) puede estar indi-
mo la mortalidad disminuyen con diagnóstico cada tras un período inicial de reposición y
y tratamiento precoces. estabilización hemodinámica con solución
salina normal (SSN).
La administración de líquidos intravenosos es
esencial para mantener el gasto cardiaco y la La administración de insulina cristalina indu-
perfusión renal, reducir la glucemia y la osmo- ce disminución de la producción pancreática
laridad plasmática y reducir las concentracio- de glucagón, inhibe la lipólisis y aumenta la
nes de glucagón, cortisol y otras hormonas utilización de glucosa por el músculo y el te-
contrarreguladoras importantes en el desarro- jido graso.
llo de la cetogénesis.
La administración de insulina en el EH no C
La gran mayoría de los pacientes pueden ser puede iniciarse dos horas después de comen-
hidratados en forma adecuada mediante la co- zada la hidratación para evitar el efecto
locación de un catéter Jelco periférico No.18 sangría.
o un catéter bilumen central de inserción pe-
riférica (PICC), el cual debe ser insertado en La dosis inicial de insulina es de 0,2 a 0,3 U
el servicio de urgencias. IV por kg de peso, continuando con una infu-
sión continua de 0,1 a 0,2 U por hora hasta
Se deben evitar los catéteres centrales subcla- cuando la glucemia llegue a niveles menores
vios o yugulares al comienzo de la hidratación, de 200 mg/dL, momento en el cual se dismi-
por las complicaciones inherentes a su uso, nuye a 0,05 U por kg/h. Se inicia la adminis-
como neumotórax y hemotórax. Posteriormen- tración concomitante de DAD 5%. Esta infu-
te, cuando el estado general haya mejorado, sión puede ser utilizada hasta que se cambie
la colocación de un catéter central o de un la vía de administración a insulina cristalina
catéter de arteria pulmonar (Swan-Ganz) pue- subcutánea cada 4-6 horas, según el esque-
de ser útil en pacientes seleccionados, en es- ma móvil descrito en el flujograma, y poste-
pecial en aquellos con enfermedades cardio- riormente mezclada con insulina NPH reparti-
pulmonares asociadas. da en dos dosis.

La sonda vesical es importante para el control Si no es posible administrar la insulina en in-


de la hidratación y la diuresis. La sonda de fusión continua por carencia de bomba de in-
succión nasogástrica está indicada en pacien- fusión, se puede utilizar un buretrol o colocar
tes con sospecha de dilatación gástrica y en el bolo inicial de 0,2 a 0,3 U de insulina crista-

643
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

lina IV y continuar con bolos cada hora de 0,1 lo cual es necesario hacer una reposición tan
U por hora. Este esquema, aunque no es el pronto se inicie el tratamiento y se haya des-
más apropiado, podría ser utilizado en zonas cartado insuficiencia renal aguda. La infusión
rurales donde no haya suficientes recursos. por el catéter PICC puede llegar hasta 10 mEq/
hora en las primeras horas, para luego dismi-
En casos de resistencia a la insulina es nece- nuirlo de manera gradual. La reposición en el
sario administrar dosis mayores. La medición EH no C es más prematura y mayor, debido a
de la glucemia dos horas después de iniciado que el déficit alcanza proporciones superiores.
el tratamiento es importante para detectar una
respuesta adecuada; debe encontrarse una La administración de fosfato es controvertida;
disminución mayor de 10% con respecto a la la mayoría de las publicaciones demuestran
cifra inicial. buenas respuestas sin su utilización. La hipo-
kalemia asociada aumenta el riesgo de rabdo-
Se debe realizar un control horario de gluce- miolisis, insuficiencia cardíaca y depresión res-
mia en las primeras horas con glucometría, piratoria, alteraciones que justifican la infusión
hasta cuando el estado crítico haya sido su- de fosfato de potasio en dosis de 30 a 50 mMol
perado. Posteriormente se realiza cada 2 ho- en 6 horas.
ras mientras continúe la infusión de insulina,
con el objetivo de mantener los niveles de glu- Los pacientes con EH no C tienen mayor ries-
cemia entre 100 y 200 mg/dL. go de desarrollar eventos trombóticos como
tromboembolismo pulmonar, tromboflebitis y
La administración de bicarbonato está indica- trombosis mesentérica, por lo cual es necesa-
da en pacientes con pH <7,1, bicarbonato <7 rio establecer anticoagulación profiláctica con
mEq/l. La dosis usual es de 100 mEq reparti- 40 mg de enoxaparina subcutánea diaria.
dos 50% en bolo IV para infusión rápida y 50%
en infusión continua por 6 horas. El control de la causa desencadenante es pri-
mordial para la buena respuesta al tratamien-
El potasio sérico por lo general se encuentra to. Las infecciones deben ser identificadas,
elevado o normal como efecto de la acidosis, localizadas y tratadas rápida y eficazmente.
pero a nivel corporal existe un déficit global que
en ocasiones oscila entre 10% y 20% (600 Todo paciente diabético debe ser educado
mEq). Con la hidratación, la administración de para que aprenda a reconocer los síntomas
insulina y la corrección de la acidosis, el potasio de una descompensación aguda a fin de pre-
sérico disminuye, incluso a niveles críticos, por venirla y de consultar de manera oportuna.

644
CAPÍTULO II: COMA HIPEROSMOLAR

ESTADO HIPEROSMOLAR

MANEJO DEL ESTADO HIPEROSMOLAR NO


CETÓSICO

CRITERIOS DIAGNÓSTICOS CAUSAS PRECIPITANTES

Glucemia mayor de 600 Manifestación inicial de una diabetes


Acidosis leve con pH > de 7,3. Suspensión de la insulina
Bicarbonato sérico > 15 mEq/L. Cirugía mayor
Cetonas séricas negativas. Trauma
Cetona urinaria positiva + o - Infección
Infarto de miocardio
Pancreatitis - Colecistitis
Medicamentos esteroides
Fenitoína, diuréticos
IRC. Dialisis peritoneal, Hemodiálisis

SÍNTOMAS Y SIGNOS OSMOLALIDAD


mOsm/L = 2 ( Na+K ) + Glucosa ( mg/dL ) + BUN(mg/dL)
18 2.8

Poliuria. polidipsia. Deshidratación severa


Instauración lenta
Confusión, estupor o coma
Singos neurológicos diversos. Focalización
Convulsiones, hemiparesia
Signos de infección
Síntomas y signos de la patología asociada

TRATAMIENTO

MEDIDAS DE EMERGENCIA PREVENTIVO

EDUCACIÓN
Ingreso a la sala de emergencia o a la UCI.
Colocar catéter periférico grueso preferiblemente El paciente debe reconocer los
Jelco # 18 o cateter Periférico bilumen PICC síntomas. Confirmar mediante la
En su defecto catéter central. práctica de glucometría
Sonda vesical (pacientes comatosos) Glucometría > 600 mg%
Sonda nasogástrica (sospecha de dilatación
gástrica. Riesgo de broncoaspiración)

645
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EXÁMENES DE LABORATORIO

Glucemia, sodio, potasio, creatinina,


nitrógeno uréico, gases arteriales,
cetonas séricas y urinarias, uroanálisis
y hemograma. Exámenes complementarios
según criterio médico

LÍQUIDOS INSULINA

1.Solución salina normal 0,9% 1000-2000 ml Insulina cristalina 0,2-0,3 U IV por kg (bolo)
en la primera hora 2 h después de iniciados los líquidos.
2.Solución salina normal 6-8 litros en 24 Insulina cristalina en infusión
horas para completar hidratación ó continuar 0,1 a 0,2 U por hora hasta obtener
Solución al medio si la osmolalidad es glucemia <200 mg/dl continuar:
> de 350 mmos ó Na > 150 Meq/L
3.Iniciar Dextrosa 5% en agua destilada Insulina cristalina 0,05 U IV hora por kg
cuando la glucemia sea < de 200 mg% de peso cuando la glucemia sea <200
(Esta puede reemplazar parcialmente la SSN) ó
4.Agua pura a tolerancia. Paciente conciente Insulina cristalina sub-cutánea
que no presente vómito ni contraindicación cada 4 – 6 horas según
para inicio de vía oral esquema móvilde glucometría:
asi:

BUSCAR CAUSA Glucometría < 100 mgdl -


101-150 3 –4 –5 U SC
151-200 6 –8 –10 U SC
DESENCADENANTE 201-250 9 -12-16 U SC
251-300 12-16-20 U SC
> 301 15-20-25 U SC
y posible bolo IV adicional
POTASIO

FOSFATO

Dosis inicial 20–30 meq/L 2-3 horas Dosis total 30-50 mMol
(Catéter PICC o Jelco # 18) (3 mMol Infusón continiua)
Continuar con 5-10 mEq/ hora si es menor 1,2 mg/ml
Reemplazar entre 300–500 meq en 24-48 horas
Descartar falla renal

INFECCIÓN Localización y tratamiento ANTICOAGULACIÓN


con antibiótico indicado PROFILÁCTICA
en particular Enoxaparina 40 mg/día SC

646
CAPÍTULO II: COMA HIPEROSMOLAR

LECTURAS RECOMENDADAS 3. Kitabchi AE, Umpierrez GE, Murphy MB, et al.


Management of decompensated diabetes.
1. Boord JB, Graber AL, Christman JW, Powers AC. Diabetic ketoacidosis and hyperglycemic
Practical management of diabetes in critically ill hyperosmolar syndrome.Crit Care Clin 2001;
patients. Am J Respir Crit Care Med 2000; 17:75-106.
164:1763-1767. 4. Management of hyperglycemic crises in patients
2. Delaney MF, Zisman A, Kettyle WM. Diabetic with diabetes. Diabetes Care 2001; 24:131-153.
ketoacidosis and hyperglycemic hyperosmolar 5. Trence DL, Hirsch IB. Hyperglycemic crises in dia-
nonketotic syndrome. Endocrinol Metab Clin North betes mellitus type 2. Endocrinol Metab Clin North
Am 2000;29:683-705 Am 2001; 30:817-831.

647
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO III

Hipoglicemia

Fernando Lizcano, MD, PhD


Profesor Asociado, Facultad de Medicina, Universidad de La Sabana
Endocrinólogo Asociado Fundación Cardio-Infantil
Bogotá

DEFINICIÓN FISIOPATOLOGÍA

L a hipoglucemia (o hipoglicemia) se define


como la reducción en el nivel de la gluco-
sa sanguínea capaz de inducir síntomas. Tra-
Los síntomas de hipoglucemia se originan en
el cerebro y en el sistema nervioso simpático.

dicionalmente se usa la tríada de Whipple para Niveles bajos de glucosa circulante llevan a una
establecer el diagnóstico de hipoglucemia: disminución de la disponibilidad de glucosa ce-
rebral, lo cual se manifiesta como confusión, irri-
1. Documentar un valor subnormal de gluco- tabilidad, alucinaciones y, en casos graves, coma
sa sanguínea por exámenes de laboratorio. y muerte. La estimulación del sistema nervioso
2. Síntomas compatibles con hipoglucemia. simpático provoca sudoración, palpitaciones,
3. Reversión de los síntomas cuando el nivel temblor y ansiedad. Los síntomas adrenérgicos
de glucosa retorna a su valor normal. siempre preceden a los síntomas neurológicos.
Existe controversia acerca del nivel de glucosa
sanguínea necesario para hacer el diagnósti- ETIOLOGÍA
co de hipoglucemia. En general se acepta que
los síntomas se presentan cuando la glucemia Las causas más frecuentes de hipoglucemia
es menor de 50 mg/dL. son la sobredosis de insulina y de hipogluce-
miantes orales. En la siguiente tabla se resu-
me la etiología de la hipoglucemia.
EPIDEMIOLOGÍA
ETIOLOGÍA DE LA HIPOGLUCEMIA
En los pacientes con síntomas sugestivos de
hipoglucemia, se documenta glucemia menor 1. Hipoglucemia de ayuno
de 50 mg/dL apenas en 5-10% de los casos. a. Hiperinsulinismo endógeno (insulinoma)
b. Deficiencias endocrinas (insuficiencia suprarrenal)
La hipoglucemia es un efecto secundario de c. Insuficiencia renal
muchos medicamentos, por lo cual su inciden- d. Fármacos (alcohol, propanol, sulfonamidas).
cia es difícil de determinar. También es una 2. Posprandial.
a. Reactiva.
complicación frecuente del tratamiento de la b. Relacionada con diabetes mellitus.
diabetes mellitus. Se presentan episodios es-
porádicos de hipoglucemia moderada en más Tomado de: Sánchez C. Hipoglucemia. En: Guías para Manejo de Urgen-
cias. Ministerio de Salud, Federación Panamericana de Asociaciones de Fa-
de 50% de los pacientes diabéticos. cultades (Escuelas) de Medicina. Bogotá, 1996.

648
CAPÍTULO III: HIPOGLICEMIA

CUADRO CLÍNICO ceso venoso, se puede utilizarse glucagón


(0,5-2 mg) intramuscular o subcutáneo. Si el
Los síntomas de la hipoglucemia se pueden paciente puede recibir alimentos, cuatro cu-
dividir en neurológicos o adrenérgicos: charadas de azúcar contribuyen 20 g de glu-
cosa, aporte muy similar al de una ampolla de
• Neurológicos: debilidad, fatiga, mareo, con- dextrosa al 50%.
fusión, visión borrosa. En casos extremos,
coma y muerte. TRATAMIENTO HOSPITALARIO
• Adrenérgicos: sudoración, taquicardia y
ansiedad. Una vez que el paciente se encuentra en el
hospital, se inicia infusión de dextrosa al 5%
El conocimiento del tiempo de inicio de los con el objetivo de mantener la glucemia por
síntomas es crucial en la evaluación diagnós- encima de 100 mg/dL. Es conveniente monito-
tica de los pacientes con hipoglucemia. Es rizar frecuentemente el nivel de glucosa san-
importante conocer si se presentan en ayuno guínea para controlar la tasa de administra-
o aparecen durante el día, en especial des- ción de dextrosa. Se debe iniciar la ingesta
pués de las comidas. de alimentos cuando el estado de conciencia
lo permita.
Los síntomas postpandriales ocurren dos a
tres horas de después de la ingesta de alimen-
tos, en particular cuando tienen un alto conte- INDICACIONES
nido de carbohidratos. Se asocian con hipoglu- DE HOSPITALIZACIÓN
cemia reactiva.
Son indicaciones de hospitalización en casos
La hipoglucemia reactiva no se manifiesta con de hipoglucemia los siguientes:
valores de glucemia tan bajos como para cau-
sar síntomas neurológicos; por lo tanto, cuan- 1. Pacientes que reciben hipoglucemiantes
do se presenta pérdida de conciencia, es ne- orales o insulina de acción prolongada.
cesario descartar una causa potencialmente 2. Pacientes en los que no se encuentra la
grave de hipoglucemia. causa de hipoglucemia.
3. Pacientes con déficit neurológico
No se suelen encontrar signos en el examen persistente.
físico.

PRONÓSTICO
TRATAMIENTO
El pronóstico depende de la causa de la hipo-
TRATAMIENTO PREHOSPITALARIO glucemia. Si la causa de hipoglucemia de ayu-
no se identifica y es tratable, el pronóstico es
La atención prehospitalaria incluye la admi- excelente.
nistración intravenosa de una ampolla de dex-
trosa al 50% que aporta 25 g de glucosa. Los Si el paciente tiene hipoglucemia reactiva, los
pacientes alcohólicos deben recibir 100 mg síntomas se manejan de manera fácil y el pro-
de tiamina antes de la dextrosa. En aquellos nóstico es muy bueno.
individuos en los que no se puede lograr ac-

649
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS 4. Lee PH, Bank DE, Flomenbaum N. Hypoglycemia


and the ABC’S (sugar). Ann Emerg Med 2000;
1. Bode BW, Sabbah H, Davidson PC. What’s ahead 36:278-279.
5. Sánchez C. Hipoglucemia. En: Guías para Mane-
in glucose monitoring? New techniques hold
jo de Urgencias. Ministerio de Salud, Federación
promise for improved ease and accuracy. Postgrad
Panamericana de Asociaciones de Facultades
Med 2001; 109:41-44.
(Escuelas) de Medicina. Bogotá, 1996.
2. Comi RJ. Approach to acute hypoglycemia. 6. Service FJ. Diagnostic approach to adults with
Endocrinol Metab Clin North Am 1993; 22:247- hypoglycemic disorders. Endocrinol Metab Clin
262. North Am 1999; 28:519-532.
3. Fanelli CG, Pampanelli S, Porcellati F, et al. 7. Service FJ. Clinical review 42: Hypoglycemias. J
Administration of neutral protamine Hagedorn Clin Endocrinol Metab 1993; 76:269-272.
insulin at bedtime versus with dinner in type 1 dia- 8. Service FJ. Hypoglycemia. Endocrinol Metab Clin
betes mellitus to avoid nocturnal hypoglycemia and North Am 1997; 26:937-955.
improve control. A randomized, controlled trial. Ann 9. Service FJ. Hypoglycemic disorders. N Engl J Med
Intern Med 2002; 136:504-514. 1995; 332:1144-1152.

650
CAPÍTULO IV: COMA MIXEDEMATOSO

CAPÍTULO IV

Coma mixedematoso

Efraim Otero Ruiz, MD


Endocrinólogo – Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l coma mixedematoso es una complica-


ción grave del hipotiroidismo, debiéndo-
se a una falta de hormona tiroidea que da co-
cia pasan inadvertidos la presencia de una
neumonía o un absceso.

mo resultado una encefalopatía. Es el estado


terminal de un hipotiroidismo no controlado. ETIOLOGÍA
Generalmente se presenta en pacientes con
incapacidad para comunicarse de manera La entidad es poco frecuente en los tiempos
adecuada, como los ancianos o las personas actuales y generalmente ocurre como conse-
con retraso mental. Se presenta en un 1% de cuencia del tratamiento del hipotiroidismo con
los casos, con una mortalidad del 50 a 70%. yodo radioactivo, pero también de la tiroidec-
Recientemente se han descrito casos en que tomía. Puesto que es más frecuente en per-
puede asociarse con otras encefalopatías, sonas de edad avanzada, la mortalidad tien-
como la causada por herpes virus. de a ser alta.

Las situaciones de estrés, como los traumatis-


mos e infecciones, son mal toleradas por el DIAGNÓSTICO
paciente hipotiroideo y pueden conducirlo a
un coma mixedematoso. El diagnóstico presuntivo se hace cuando las
manifestaciones clínicas de hipotiroidismo (in-
tolerancia al frío, resequedad de la piel, estre-
CUADRO CLÍNICO ñimiento, debilidad, somnolencia y aumento
de peso) se acompañan de alteraciones en el
El coma mixedematoso se caracteriza por sig- estado de conciencia, hipotermia, hipoventila-
nos de mixedema, hipotensión, bradicardia, ción e hipotensión. Conforme progresa el mi-
hipoventilación, hipotermia y, ocasionalmente, xedema se hacen evidentes la desorientación
convulsiones. Comúnmente existe el antece- y el coma que con frecuencia se acompaña
dente de hipotiroidismo de largo tiempo de de convulsiones.
evolución que en los ancianos puede pasar
inadvertido. Puesto que la hipotermia es un Al examen físico debe buscarse alguna cica-
hallazgo que está presente en casi todos los tricez antigua de tiroidectomía y la existencia
casos, una temperatura normal o ligeramente de cardiomegalia, derrame pleural, ascitis, íleo
elevada, sugiere un proceso infeccioso, el cual e hiporreflexia.
debe ser investigado y tratado. Con frecuen-

651
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

HALLAZGOS DE LABORATORIO La hipotensión hace necesaria la adminis-


tración de soluciones cristaloides (solución
Las pruebas de función tiróidea señalan nive- salina normal o lactato de Ringer).
les disminuidos de T3 y T4 lo mismo que el
índice de T4 libre; además existe elevación La hipotermia se trata con recalentamiento
de TSH en casos de falla tiroidea primaria. pasivo. Se debe evitar el recalentamiento ex-
Las determinaciones de gases arteriales com- terno rápido, ya que esta medida puede exa-
prueban la existencia de hipoxemia, hipercap- cerbar la insuficiencia respiratoria por un au-
nia y acidosis respiratoria. Por su parte, los mento de las necesidades de oxígeno y una
electrolitos en sangre detectan hiponatremia. disminución del tono periférico.

La hipoglicemia se corrige con la adminis-


HALLAZGOS RADIOLÓGICOS tración de glucosa al 50% (ver Guía “Hipoglu-
cemia”).
Las radiografías del tórax pueden señalar un
incremento de la silueta cardiaca debido a la
existencia de un derrame pericárdico. Un en- SUSTITUCIÓN DE LA HORMONA
sanchamiento de mediastino superior puede TIROIDEA
indicar la presencia de bocio sumergido o
endotorácico. Una sola dosis de 200-500 microgramos (0,2-
0,5 mg) de levotiroxina sódica por vía IV resti-
tuye las reservas corporales, seguida de 0,1
HALLAZGOS mg/día IV hasta que el paciente pueda recibir
ELECTROCARDIOGRÁFICOS el fármaco por vía oral. Si no se cuenta con la
levotiroxina en ampollas, se recurre a los com-
El electrocardiograma detecta bradicardia binados de T4 y T3 administrados por vía oral.
aplanamiento o inversión de la onda T y bajo El efecto terapéutico obtenido está en relación
voltaje en el complejo QRS. con el contenido de T3, la cual es cuatro veces
más potente que T4. Se administran por son-
da nasogástrica o vía oral, 25 a 40 microgra-
TRATAMIENTO mos de T3 cada 6 horas. Debe vigilarse el rit-
mo cardiaco durante la administración de hor-
MEDIDAS GENERALES monas tiroideas por el peligro de taquiarrit-
mias. La dosis oral se irá aumentando gra-
El tratamiento se inicia de inmediato, en cuan- dualmente en los días siguientes hasta alcan-
to se hayan tomado los exámenes de labora- zar el estado eutiroideo.
torio y antes de obtener los resultados. Los
pasos iniciales se dirigen al mantenimiento de Es recomendable la adminstración de 100 a
las funciones vitales: 200 mg IV de hidrocortisona en bolo y poste-
riormente 100 a 400 mg IV/día, por la posibili-
La hipoventilación puede ocasionar reten- dad de una insuficiencia suprarrenal asocia-
ción de CO≤; se procede a una enérgica lim- da, la cual puede precipitarse por la admi-
pieza bronquial y, si es necesario, se utlizará nistraión de hormonas tiroideas.
ventilación asistida.

652
CAPÍTULO IV: COMA MIXEDEMATOSO

Manejo concomitante. Es perentorio identi- LECTURAS RECOMENDADAS


ficar y tratar la causa precipitante del coma
mixedematoso. Los signos de infección pue- 1. Doherty MJ, Baxter AB, Longstreth WT Jr. Herpes
den estar enmascarados. Ante la sospecha simplex virus encephalitis complicating myxedema
de infección se administran antibióticos de ma- coma treated with corticorsteroids. Neurology
2001; 56 : 1114-5.
nera empírica, hasta que se cuente con los
2. Ringel MD. Management of hypothyroidism and
resultados de los cultivos (hemocultivo, uro- hyperthyroidism in the intensive care unit. Crit Care
cultivo y de esputo) y de las pruebas de sen- Clin 2001;17:59-74.
sibilidad. 3. Vasa FR, Molitch M. Endocrine problems in the
chronically critically ill patient. Clin Chest Med
Es pertinente evitar la administración de fár- 2001; 22:193-208.
macos que produzcan efectos depresores so- 4. Wall CR. Myxedema coma: diagnosis and
bre el sistema nervioso central, ya que los pa- treatment. Am Fam Physician 2000; 16:2485-2890.
5. Yamamoto T. Factors associated with mortality of
cientes hipotiroideos son más sesibles a ellos.
myxedema coma: report of eight cases and
literature survey. Thyroid 1999; 9: 1167-74.

653
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Crisis tirotóxica

Efraim Otero Ruiz, MD


Endocrinología
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a crisis tirotóxica es la exacerbación agu-


da de la totalidad de los síntomas de la
tirotoxicosis, lo cual constituye una urgencia
cetoacidosis diabética y parto. La concentra-
ción total de hormona tiroidea circulante T4 y
T3 durante la crisis no difiere en mucho con la
que pone en peligro la vida del paciente. Es la que normalmente se presenta en el hipertiroi-
exacerbación repentina y grave del hipertiroi- dismo; sin embargo, la concentración sérica
dismo y se observa en pacientes con bocio de tiroxina libre suele estar aumentada.
tóxico difuso y ocasionalmente, en quienes tie-
nen bocio multinodular tóxico. Su pronóstico
no es bueno, con una mortalidad aproximada CUADRO CLÍNICO
del 10%, aún si se atiende en forma adecuada.
Es característivo el comienzo súbito de la cri-
Excepcionalmente puede presentarse como sis, con manifestaciones de marcado hiperme-
un cuadro leve que se manifiesta como fiebre tabolismo y respuesta adrenérgica. Son evi-
de causa no explicada en un paciente someti- dentes los signos de hipertiroidismo: piel ca-
do a cirugía tiroidea, que no ocurre con mayor liente, hiperémica y húmeda; taquicardia (ge-
severidad luego de cirugía, tratamiento con neralmente aparece fibrilación auricular); dis-
yodo radioactivo o parto en una paciente con nea de esfuerzo, náuseas, vómito, diarrea,
hipertiroidismo no bien controlado o en el cur- dolor abdominal y alteraciones del estado de
so de una enfermedad aguda. cociencia (brotes psicóticos y delirio).

La triada para dignosticar crisis tirotóxica in-


ETIOLOGÍA cluye:
a. Frecuencia cardiaca ≥ 130/minuto.
Este cuadro clínico se precipita cuando se b. Temperatura corporal >37°C.
desencadenan estadíos de estrés intercurren- c. Hipertensión arterial sistólica.
tes, como infecciones, traumatismos y cirugía
en pacientes con tirotoxicosis insuficientemen- Las manifestación clínica más dramática es
te tratados o en la llamada “falla orgánica la hiperpirexia.
múltiple”. También puede presentarse des-
pués de efectuar resecciones de bocios tóxi- Otras manifestaciones son exoftalmos, retrac-
cos en pacientes con preparación preopera- ción palpebral e hiperreflexia. En los casos
toria deficiente (crisis postoperatoria), rara vez tardíos con estado de coma, el diagnóstico
después de administrar dosis terapéutica de debe sospecharse ante la presencia de fie-
yodo radioactivo, I-131, o secundariamente a bre, taquicardia y bocio.

654
CAPÍTULO V: CRISIS TIROTÓXICA

La muerte se produce por shock hipovolémico, Ocasionalmente se han empleado también


coma o falla cardiaca congestiva y taquiarrit- sedación e hipotermia, similares a las emplea-
mias. das en cirugía abierta, También se ha sugeri-
do como tratamiento de emergencia la plas-
maféresis, para reducir el nivel circulante de
EXÁMENES PARACLÍNICOS hormonas tiroideas.

Durante la crisis resulta dificil obtener los re- Se busca con estas medidas disminuir la ac-
sultados de las pruebas de función tiroidea, ción hormonal y bloquear la síntesis de la hor-
pero los exámenes previos confirman la exis- mona, al tiempo con inhibir la acción adrenér-
tencia de tirotoxicosis, Los hallazgos típicos gica catecolamínica.
son la elevación de T3 y T4, y la supresión de
TSH. BLOQUEO DE LA SÍNTESIS

Aunque no son característicamente importan- Los fármacos preferidos son los compuestos
tes los desequilibrios electrolíticos, puede pre- de tirourea, que se administran por vía oral o
sentarse hipercalcemia leve, hipo o hipergli- sonda nasogástrica, como el propiltiouracilo
cemia e hipo o hipernatremia. que se ordena en dosis de carga de 600 mg
seguidos de 300 mg cada 6 horas. También
Ocasionalmente se detecta linfocitosis y dis- el metimazol (Tapazol) en dosis de 10-15 mg
función hepática. Por lo tanto, es aconsejable cada 6 horas. Debe indicarse 10 gotas de so-
solicitar electrolitos en suero, cuadro hemático lución de lugol tres veces al día. Su adminis-
y pruebas de función hepáticas. tración ha de efectuarse una o dos horas des-
pués de haber iniciado las drogas antitiroideas
para evitar la utilización del yodo en la sínte-
TRATAMIENTO sis de hormonas tiroideas. El yodo oral se pro-
longa por dos semanas después de la resolu-
MEDIDAS GENERALES ción del episodio agudo.

Si se sospecha el diagnóstico no deben es- DISMINUCIÓN DE LOS EFECTOS HORMONALES


perarse los resultados de laboratorio para ini-
ciar el tratamiento. Se mantiene la vía aérea El propanolol y otros antagonistas beta-adre-
permeable y se administra oxígeno a razón nérgicos bloquean los efectos periféricos del
de 5 litros/minuto con mascarilla o cánula na- exceso de la hormona tiroidea. Se usa propa-
sal. La disminución de la temperatura se lo- nolol en dosis de 2 a 10 mg IV (0.5 a 1 mg/
gra con medios físicos o acetaminofen (está minuto). La dosis máxima es de 0.15 mg/kg
contraindicado el uso de aspirina, ya que au- cada 6 horas, bajo vigilancia electrocardiográ-
menta el nivel de hormonas tiroideas libres). fica y de presión arterial. También se puede
El aporte parenteral de líquidos para evitar la suministrar por vía oral o por sonda nasogás-
dishidratación se hace con base en solucio- trica en dosis de 40 mg cada 8 horas. En pa-
nes de electrolitos y glucosa (dextrosa al 5% cientes susceptibles a presentar broncoes-
en AD). Es esencial iniciar la monitoría electro- pasmo se prefiere atenolol 100 mg/día. Los
cardiográfica. betabloqueadores deben utilizarse con pre-
caución en los pacientes con insuficiencia
cardiaca congestiva.

655
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Una medida adicional, aunque controvertida, LECTURAS RECOMENDADAS


es la administración de glucocorticoides. Se
usa hidrocortisona en dosis de 100 a 300 mg/ 1. Ashikaga H, Abreu R, Schneider RF. Propanolol
día o dexametasona 2 mg cada 6 horas VO o administration in a patient with thyroid storm. Ann
IV. Pueden inhibir la conversión periférica de Internet Med 2000; 132:681-682.
2. Gavin LA. Thyroid crisis. Med Clin North Am. 1991;
T4 a T3, además de disminuir la liberación de
75:179-193.
hormonas tiróideas. Se usan únicamente du- 3. Jiang YZ Hutchinson KA, Bartelloni P, Manthous
rante las primeras horas de tratamiento. CA. Thyroid storm presenting as multiple organ
dysfunction syndrome. Chest 2000; 118:877-879.
4. Kunishige M, Sekimoto E, Komatsu M, et al.
TRATAMIENTO DE LAS ENFERME- Thyrotoxicosis masked by diabetic ketoacidosis:
a fatal complication. Diabetes Care 2001; 24:171.
DADES COEXISTENTES 5. Ligtenberg J, Tulleken J, Zijlstra J. Plasmapheresis
in thyrotoxicosis.Ann Intern Med 1999; 131:71-72.
Es obligatoria la investigación y tratamiento 6. Nicoloff JT. Thyroid storm and myxedema coma.
de las enfermedades coexistentes, presumi- Med Clin North Am1985; 69: 1005-1017.
blemente precipitantes. En primer orden es- 7. Portocarrero J. Tirotoxicosis. En: Medicina Inter-
tán las infecciones para las cuales se solici- na. Editado por F Chalem, JE Escandón, J Cam-
tan cultivos de sangre, orina, esputo y líquido pos, R Esguerra. Fundación Instituto de Reuma-
cefalorraquídeo. No es aconsejable el uso de tología e Inmunología. Editorial Presencia Ltda.
antibióticos profilácticos. Bogotá, 1992.
8. Tyrrel JB, Aron DC, Karam JH. Urgencias
metabólicas y endocrinológicas. En: Diagnóstico
Manejo ulterior. Con un manejo adecuado, la y Tratamiento de Urgencias. Editado por MT Ho.
mayoría de los pacientes mejoran dentro de El Manual Moderno. México DF, 1991.
las primeras 24 horas. Controlada la crisis, se
planifica un tratamiento del hipertiroidismo a
largo plazo.

656
CAPÍTULO VI: INSUFICIENCIA SUPRARRENAL

CAPÍTULO VI

Insuficiencia suprarrenal

Efraín Otero, MD
Endocrinólogo - Fundación Santa Fe de Bogotá.

L a insuficiencia suprarrenal, tanto aguda


como crónica, se manifiesta con una sinto-
matología que obliga al paciente a recurrir al
tuberculosis continúa observándose en nues-
tro medio y con frecuencia se detecta la en-
fermedad bacilar activa en otros órganos, lo
médico de urgencias. Los síntomas varían cual sugiere una diseminación hematógena.
desde trastornos neuropsiquiátricos insidiosos Otras causas menos frecuentes las constitu-
hasta complicaciones de suma gravedad. La yen las neoplasias, el SIDA, la amiloidosis y
ausencia de secreción de glucocorticoides o las infecciones micóticas. La hemorragia su-
mineralocorticoides tiene consecuencias se- prarrenal bilateral se diagnostica en raras oca-
rias, puesto que estas hormonas son indis- siones. Los tres factores principales de ries-
pensables para conservar la presión arterial, go de hemorragia suprarrenal son: enferme-
el volumen, la homeostasis de la glucosa y dad tromboembólica, coagulopatías y estado
una gran variedad de funciones. postoperatorio. La presencia de dos de los fac-
tores antes mencionados, en un paciente en
estado de shock, que no responde a la infu-
ETIOLOGÍA sión de volumen e inotrópicos, obliga a des-
cartar esta entidad.
Insuficiencia suprarrenal primaria: La adre-
nalitis autoinmune y la tuberculosis causan Insuficiencia suprarrenal secundaria: gene-
más del 90% de los casos. La forma autoin- ralmente se encuentra en pacientes que han
mune se asocia con diversas enfermedades recibido glucocorticoides en dosis altas (> 25
de supuesta patogenia inmune tales como la mg de cortisol) por un lapso mayor a dos se-
tiroiditis linfocítica crónica, la tiroiditis tirotóxica manas, o que presentan trastornos hipotalá-
silente, la enfermedad de Graves, el hipogona- mico-hipofisiarios (con frecuencia acompaña-
dismo y la anemia perniciosa. No es infrecuen- dos de panhipopituitarismo).
te que uno o varios de estos trastornos aparez-
can consecutivamente en el mismo paciente, La causa más común es la suspensión de la
por lo que la presencia de uno de ellos debe ingesta de esteroides. La interrupción, aun-
sugerir la posibilidad de la existencia oculta que se realice con suma cautela, puede pro-
de cualquier otro. Es improbable que muchas ducir una hipofunción suprarrenal e incluso
de las formas de insuficiencia suprarrenal ca- exacerbar el trastorno subyacente. Además,
talogadas anteriormente como idiopáticas, po- en condiciones de estrés sobreañadido, las
sean una base autoinmune. Por su parte, la dosis de mantenimiento de esteroides resul-
destrucción granulomatosa de la glándula por tan a veces insuficientes.

657
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DIAGNÓSTICO aldosterona para retener el sodio. La hiper-


calcemia es causante de arritmias cardíacas.
Manifestaciones clínicas: Las característi- El déficit de mineralocorticoides y glucocorti-
cas principales son hipovolemia, hipotensión coides desempeña un papel importante en la
arterial, letargia y anorexia. Se sospecha in- aparición de la hiperportasemia. La hipoglu-
suficiencia suprarrenal aguda en pacientes cemia no resulta infrecuente y la disminución
críticamente enfermos con respuesta inade- de la velocidad de filtración glorumelar origi-
cuada a líquidos y agentes presores. La hemo- na un incremento en la concentración de la
rragia suprarrenal bilateral se acompaña de creatinina sérica y del nitrógeno uréico (BUN).
dolor lumbar o dolor abdominal. Para el diagnóstico bioquímico de certeza de
la insuficiencia suprarrenal es necesario de-
A la exploración física se detecta hiperpigmen- mostrar una deficiencia, absoluta o relativa,
tación de los pliegues cutáneos, superficies de hormonas suprarrenales con abolición de
de extensión, los surcos palmares, las muco- las reservas. La combinación de niveles plas-
sas y los bordes gingivales. El vitiligo se ha máticos reducidos de cortisol y elevados de
asociado con insuficiencia suprarrenal prima- ACTH confirma el diagnóstico de insuficien-
ria autoinmune. cia primaria.

La hipotensión se detecta en el 88% de los Hallazgos radiológicos: La radiografía de


pacientes, y mareo postural en un 12% lo cual tórax pone en evidencia, generalmente, la
refleja la reducción del volumen intravascular existencia de un corazón pequeño. En la pla-
y la disminución del inotropismo y del gasto ca de abdomen simple pueden observarse
cardíaco. calcificaciones de las glándulas suprarrenales
por lesiones tuberculosas o de histoplasmosis.
A nivel gastrointestinal, la anorexia, la pérdida
de peso, las náuseas y los vómitos son prác-
ticamente constantes en los enfermos y la dia- TRATAMIENTO
rrea no resulta infrecuente. El dolor abdomi-
nal, en ocasiones muy intenso, suele producir Una vez efectuado el diagnóstico de insufi-
un cuadro de seudoperitonitis con signos de ciencia suprarrenal aguda, el tratamiento debe
abdomen agudo que puede dar lugar a una comenzar en forma inmediata. Después de
laparotomía exploradora en blanco. No se co- insertar un catéter intravenoso de grueso ca-
noce el mecanismo exacto de este síndrome libre (> 16), en ocasiones es necesario medir
doloroso el cual se alivia rápidamente median- la presión venosa central, se administra fosfato
te el aporte exógeno de esteroides. o hemisuccinato de hidrocortisona en una
dosis inicial de 100 mg que deberá repetirse
Muchos de estos cuadros se acompaña de cada 6 horas durante las primeras 24 horas;
alteraciones mentales (por ejemplo:confusión, también puede administrarse en goteo conti-
psicosis aguda, delirio y coma) y trastornos nuo (100 mg en 500 mL de Dextrosa al 5% en
neurológicos menos frecuentes. SS con una velocidad de 10 a 15 mg por hora).
Si persisten la hipotensión o las anomalías
Datos de laboratorio: la hiponatremia apa- electrolíticas, se administra acetato de desoxi-
rece en el 90% de los pacientes con insuficien- corticosterona, (2 a 3 mg en solución oleosa
cia suprarrenal. La etiología de esta complica- 1M o fluorohidrocortisona 0,1 a 0,2 mg por vía
ción se relaciona con la incapacidad de la oral). La dexametasona y la prednisona

658
CAPÍTULO VI: INSUFICIENCIA SUPRARRENAL

carecen de efecto mineralocorticoide, por lo vamente). A menudo es conveniente añadir


cual no es conveniente utilizarlas en el con- un mineralocorticoide (fluorhidrocortisona 0,1
trol de la crisis suprarrenal. a 0,2 mg/día).

Se repone el volumen y los electrolitos perdi-


dos y se corrige la hipoglicemia. El tratamiento LECTURAS RECOMENDADAS
debe ser agresivo, sobre todo en caso de hipo-
tensión severa, comenzando por administrar 1. Achermann JC, Silverman BL. Dehydroepiandros-
un litro de dextrosa al 5% en SS durante los terone replacement for patients with adrenal
insufficiency. Lancet 2001; 357:1381-2.
primeros 60 minutos; la mayoría de los pa- 2. Albert SG, DeLeon MJ, Silverberg AB. Possible
cientes requieren entre 3 y 4 litros de líquidos association between high-dose fluconazole and
el primer día. Aunque inicialmente el potasio adrenal insufficiency in critically ill patients. Crit
sérico está aumentado, por lo general hay un Care Med 2001; 29:668-70.
déficit de potasio corporal total; de modo que 3. Arlt W, Callies F, van Vlijmen JC, et al. Repetitive
graded ACTH stimulation test for adrenal
la reposición se inicia cuando éste empiece a
insufficiency. J Endocrinol Invest 2000; 23:163-9.
bajar después de la hidratación y la adminis- 4. Huebler D, Oettel M, Ernst M, et al. Dehydro-
tración de hidrocortisona. Una vez controladas epiandrosterone replacement in women with
las manifestaciones de carácter grave, se adrenal insufficiency. N Engl J Med. 1999;
reduce gradualmente la dosis de esteroides y 341:1013-20.
5. Krasner AS. Glucocorticoid-induced adrenal
se instaura una dosis oral de mantenimiento
insufficiency. JAMA 1999; 282:671-6.
a base de hidrocortisona (20 mg por la maña- 6. Rivers EP, Gaspari M, Saad GA, et al. Adrenal
na y 10 mg por la tarde) o una dosis equiva- insufficiency in high-risk surgical ICU patients.
lente de prednisona (7,5 mg a 5 mg respecti- Chest 2001; 119:889-96.

659
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VII

Crisis gotosa

Carmen Cecilia Gómez Flórez, MD


Especialista en Medicina Interna
Servicio de Urgencias
Fundación Cardioinfantil
Bogotá

DEFINICIÓN

L a gota, una de las formas más antiguas


de artritis, es una enfermedad metabólica
de naturaleza heterogénea, a menudo fami-
• Hiperuricemia primaria: idiopática, ano-
malías del metabolismo.
• Hiperuricemia secundaria: ingesta exce-
liar, caracterizada por hiperuricemia y depósi- siva de purinas, consumo excesivo de
tos de urato monosódico en articulaciones y alcohol, fase blástica de enfermedades
otros tejidos extrarticulares. Se define la hipe- linfo y mieloproliferativas, radio o quimio-
ruricemia como una concentración sérica de terapia en leucemias y linfomas, mielo-
ácido úrico >7 mg/dL. Es más frecuente en el ma múltiple, policitemia, anemias hemo-
hombre que en la mujer, relación 3:1. En hom- líticas, glucogenosis tipo III, V y VII, pso-
bres se presenta usualmente alrededor de los riasis extensa.
30 años, mientras que en las mujeres general- b) Disminución de la excreción de ácido úrico
mente se presenta en la postmenopausia. (90%).
Puede asociarse con diabetes mellitus (DM), • Hiperuricemia primaria: idiopática, sin le-
obesidad, dislipemia e hipertensión arterial sión renal previa.
(HTA). • Hiperuricemia secundaria: ingesta de al-
cohol, fármacos (tiazidas, etambutol,
La gota puede clasificarse en: salicilatos a dosis bajas, pirazinamida,
• Primaria: aquella que se presenta en au- ciclosporina, ácido nicotínico, levodopa),
sencia de enfermedades aparentes, dieta acidosis láctica, cetoacidosis, síndrome
o fármacos. de Down, insuficiencia renal crónica, in-
• Secundaria: la que se asocia a cualquier toxicación por plomo, hiperparatiroidis-
causa de hiperuricemia prolongada. Las mo, sarcoidosis.
más frecuentes son las inducidas por diu-
réticos y las relacionadas con alteraciones
mieloproliferativas. La insuficiencia renal y DIAGNÓSTICO
la psoriasis son causas infrecuentes.
CLÍNICO
La hiperuricemia puede deberse a: Depende de los diversos estados:
a. Aumento de la producción de ácido úrico • Hiperuricemia asintomática: elevación
(10%). sérica del ácido úrico sin evidencia clínica

660
CAPÍTULO VII: CRISIS GOTOSA

de depósitos de cristales de urato • En casos en los cuales es imposible reali-


monosódico. zar el estudio de líquido sinovial, incluído
• Gota aguda: se presenta como monoartritis el estudio de los cristales, la respuesta rá-
aguda con eritema, calor y rubor, especial- pida al tratamiento con colchicina o anti-
mente en la primera articulación metatarso- inflamatorios no esteroideos (AINES) en un
falángica (podagra), pero puede afectar individuo con hiperuricemia y monoartritis,
otras articulaciones. En mujeres puede ser sugiere el diagnóstico de gota.
poliarticular; incluso, puede presentarse el
proceso inflamatorio a nivel de nódulos de
Heberden si hay osteoartrosis asociada. CLAVES DIAGNÓSTICAS
• Gota intercrítica: periodo asintomático en-
tre los ataques agudos. En 67% de los ca- • Inicio agudo, típicamente nocturno y usual-
sos la recurrencia después del primer epi- mente monoarticular; a menudo compro-
sodio ocurre en el primer año. mete la primera articulación metatarso
• Gota tofácea crónica: Se caracteriza por la falángica y requiere atención de urgencia.
presencia de tofos (depósito de cristales • Descamación postinflamatoria y prurito.
de urato monosódico rodeado de células • Hiperuricemia en la mayoría, el diagnósti-
inflamatorias y fibroblastos), en articulacio- co se confirma con la identificación de cris-
nes, bursas y otros tejidos extraarticulares. tales de urato monosódico en fluido articu-
lar o tofos.
Se deben tener en cuenta los siguientes as- • Respuesta terapeútica dramática al uso de
pectos: AINES o colchicina
• Historia clínica detallada (antecedentes fa-
miliares y personales, antecedentes de ar- EXÁMENES DE LABORATORIO
tritis gotosa, cálculos urinarios de ácido úri-
co o tofos). Considerar el diagnóstico de Las concentraciones séricas de ácido úrico
artritis séptica. valoradas como hiperuricemia son:
• Exploración física (problemas articulares, • Hombre: >7 mg/dL ó 0,42 mmol/L.
tofos, litiasis úrica y nefropatía). La articu- • Mujer: > 6 mg/dL ó 0,36 mmol/L.
lación más frecuentemente afectada es la
primera metatarsofalángica, manos y tam- El ácido úrico no debe determinarse de forma
bién tobillo y rodilla. sistemática, aunque sí en caso de mono u
• Plantear diagnóstico etiológico para iden- oligoartritis, litiasis renal, presencia de tofos o
tificar causas tratables. ingesta de tiazidas, ciclosporina o pirazina-
• Uricosuria de 24 horas (uricosuria >700- mida. También en pacientes con leucemias o
1000 mg/24h indica sobreproducción de enfermedades linfoproliferativas antes y des-
ácido úrico). pués de tratamientos radio o quimioterápicos.
• Valorar la coexistencia de: obesidad, into-
lerancia a la glucosa, HTA, DM tipo II, car- El diagnóstico de gota aguda se realiza me-
diopatía isquémica, hiperlipoproteinemia diante la identificación de cristales de urato
tipo IV (asociadas a hiperuricemia / gota). monosódico articulares. Al practicar el análi-
• El diagnóstico de la artritis gotosa se reali- sis del líquido sinovial deben realizarse tam-
za mediante la identificación de cristales bién estudios citoquímicos, tinción de Gram y
de urato monosódico en el líquido sinovial. cultivo para descartar la presencia de infec-
ción.

661
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La determinación seriada de ácido úrico uri- • Dieta baja en purinas (evitar café, carnes
nario en 24 horas, sirve para definir si el pa- rojas).
ciente es hipo o normoexcretor (90% de los • Ingesta hídrica elevada (2 litros/día).
casos) o hiperexcretor (10%), si la cuantifica- • Valorar la existencia de fármacos que ele-
ción es igual o mayor a 800mg. van el nivel de ácido úrico en sangre y la
posibilidad de retirarlos.
En todo paciente con gota debe solicitarse
además perfil lipídico, uroanálisis y pruebas En los estados crónicos, habiéndose docu-
de función renal. mentado la hiperuricemia, el manejo se fun-
damenta en terapias orientadas a reducir los
niveles de ureatos en sangre. Lo primero es
IMÁGENES DIAGNÓSTICAS el cambio en los hábitos de vida, tales como
dieta, reducción de peso, limitación en la
En etapas tempranas de la enfermedad, las ingesta de alcohol y evitar drogas y medica-
radiografías no muestran cambios. En un ata- mentos que induzcan altos niveles de ácido
que agudo puede haber edema de tejidos úrico. Las dos drogas de escogencia para re-
blandos y en la fase crónica erosiones con ducir la hiperuricemia son el alopurinol y el
borde escleroso. Cuando hay condrocalcinosis agente uricosúrico probenacid.
asociada, se puede hacer el diagnóstico si
está calcificado el cartílago hialino. En general, En la gota aguda, además de la colchicina y
el papel diagnóstico de la radiología es los AINES, puede ser necesaria la aplicación
escaso. de diclofenaco IM, que tiene un efecto rápido
y eficaz. Si no es posible realizar tratamiento
estándar por contraindicaciones médicas o
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL farmacológicas, se puede recurrir a los esteroi-
des intraarticualres y/o sistémicos y a la pun-
Con la artritis séptica piógena y con la condro- ción para drenaje de la articulación (artrocen-
calcinosis (enfermedad por depósito de piro- tesis). La inmovilización de la articulación y el
fosfato de calcio dihidratado), en su manifes- uso de analgésicos están indicados.
tación de pseudogota, si bien clínicamente hay
diferencias, es el análisis del líquido sinovial TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
el que da la certeza diagnóstica bien aislando
la bacteria o por la detección de cristales intra- En las Tablas 1 y 2 se detallan los esquemas
celulares de pirofosfato de calcio el cual es de tratamiento tanto de la gota aguda como
de birrefringencia débilmente positiva, de me- de los diversos estadios clínicos.
nor tamaño y de extremos aplanados.

TRATAMIENTO
MEDIDAS NO FARMACOLÓGICAS
• Aconsejar abstenerse de alcohol.
• Valorar comorbilidad: HTA, sobrepeso,
dislipidemia, psoriasis y enfermedad
vascular.

662
CAPÍTULO VII: CRISIS GOTOSA

TABLA 1. TRATAMIENTO DE GOTA AGUDA

MEDICAMENTO DOSIS COMENTARIO


AINES
Indometacina 25-50mg c/6-8 horas x 24-48 horas, De elección, también son útiles otros
continuar según síntomas. AINES como rofecoxib, nimesulida
o diclofenaco.
Celecoxib 200 mg/día Inhibidor selectivo de COX-2.
Rofecoxib 25 mg cada12 horas VO. Inhibidor selectivo de COX-2.
Nimesulida 100 mg cada 12 horas VO. Inhibidor selectivo de COX-2.
Diclofenaco 75 mg IM.
Colchicina 0,5 mg vía oral c/hora hasta obtener Efectos secundarios: diarrea, dolor
mejoría o presencia de efectos secun- abdominal, nauseas o vómito, mayor
darios, dosis total 4-6 mg ó 2 mg en eficacia en las primeras horas de ini-
20-50 cc SSN IV, se pueden repetir cio de los síntomas hasta las 24 horas.
2 dosis de 1mg hasta completar 4 mg.
Corticoides Orales Prednisolona 30 mg x 7 dias. Gota poliarticular, casos refractarios.
Corticoides intraarticulares Hexacetónido de triamcinolona 10 a Gota monoarticular, casos refracta-
40 mg intraarticular. rios, debe descartarse infección
articular.
Reposo Durante y hasta 24 horas después Deambulación temprana puede pro-
del ataque agudo ducir recaída.

TABLA 2. TRATAMIENTO DE ESTADIOS CLÍNICOS

ESTADIO CLÍNICO TRATAMIENTO COMENTARIO


Hiperuricemia asintomática Ninguno De elección, también son útiles otros
(normo o hipoexcretor) AINES.
Hiperuricemia asintomática, hiperex- Alopurinol 100 mg vía oral dosis de Efectos secundarios: puede precipi-
cretor, especialmente en orina por mantenimiento 300 mg VO/día o tar un ataque agudo, rash cutáneo,
encima de 1.100 mg en 24 horas o probenecid 4,5 a 5,25 mg VO/día en raras vasculitis y hepatitis.
niveles séricos de ácido úrico supe- pacientes alérgicos o combinado en
riores a 10 mg/dL. pacientes resistentes a alopurinol, o
sulfinpirazona 50 mg VO 3 veces al día.
Gota intercrítica (2 ataques al año Ninguno
o menos)
Gota intercrítica (3 ataques al año Alopurinol 100-300mg VO/día y col- Luego de 6 meses asintomático y de
o más) chicina 1mg VO/día. normalización de ácido úrico, se sus-
pende colchicina, se continúa con
alopurinol; los AINES pueden sustituir
la colchicina.
Gota tofácea crónica Alopurinol 300 mg VO /día

663
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Algoritmo para el manejo de la gota aguda


Modificado de: A.K. Rosenthal.
En: Conn´s Current Therapy 2003. Saunders. Philadelphia, 2003.

664
CAPÍTULO VII: CRISIS GOTOSA

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Agudelo CA, Wise CM. Crystal-associated arthritis 6. Schumacher HR Jr, Boice JA, Daikh DI, et al.
in the elderly. Rheum Dis Clin North Am 2000; Randomised double blind trial of etoricoxib and
26:527-46. indometacin in treatment of acute gouty arthritis.
2. Harris M, Siegel L. Gout and hyperuricemia. Am BMJ 2002; 324:1488-92.
Fam Phy 1999; 59:925-34. 7. Stephan W. Use of Intravenous colchicine in
3. Janson R. Gota En: Secretos de la Reumatologia. patients with acute gout. Am Fam Phy
West S (Ed). Mac-Graw Hill. Interamericana 2002. 2000;61:2343-4
4. Kelley W, Schumacher HR. Crystal associated 8. Tierney L, McPhee S. Arthritis and muscoloskeletal
synovitis. Gout. En: Kelley WN, Ed. Textbook of disorders. En: Current Medical Diagnosis and
Rheumatology. WB Saunders. Philadelphia, 2001. Treatment. Tierney L, Whooley M (Ed) Appleton
5. Rosenthal AK. Gout and hyperuricemia. En: and Lange. New York, 2003.
Conn´s Current Therapy 2003. Saunders. 9. Wortmann RL. Hyperuricemia and gout. Curr Opin
Philadelphia, 2003. Rheumatol 2002; 14: 281-6.

665
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VIII

Hipercalcemia

Fernando Lizcano, MD, PhD


Profesor Asociado, Facultad de Medicina, Universidad de La Sabana
Endocrinólogo Asociado Fundación Cardio-Infantil
Bogotá

DEFINICIÓN

H ipercalcemia se define como un valor de


calcio sérico superior a 10,5 mg/dL (ran-
go normal: 8,5-10,5 mg/dL). Si se mide el cal-
puede disminuir por el efecto vasoconstrictor
de la hipercalcemia.

cio iónico, el nivel diagnóstico es de 1,32 En el corazón, los niveles séricos elevados
mmol/L (rango normal: 1,16-1,32 mmol/L). de calcio alteran el sistema de conducción car-
díaco y producen arritmias. El calcio tiene
El metabolismo del calcio está regulado por efecto inotrópico positivo. Puede producir hi-
un conjunto de hormonas que afectan la absor- pertensión como resultado de los cambios
ción del calcio desde el tracto gastrointestinal sobre el riñón y, al parecer, por una acción
y la resorción ósea, y por otra parte, por la vasoconstrictora directa en el sistema arterial.
excreción renal.
Las manifestaciones de hipercalcemia en el
La hipercalcemia puede ser el resultado de tracto gastrointestinal incluyen anorexia, naú-
paso excesivo de calcio al espacio extracelular sea, vómito y estreñimiento. La hipercalcemia
o de alteraciones en su excreción. estimula la producción de gastrina, que puede
producir enfermedad ulcerosa péptica. Tam-
bién puede causar pancreatitis.
FISIOPATOLOGÍA
La gravedad de los síntomas no se asocia con
La hipercalcemia afecta a todos los órganos el nivel absoluto de calcio, pero sí con la velo-
del cuerpo, pero con particular importancia al cidad del incremento de los niveles séricos.
sistema nervioso central y al riñón. Niveles séricos mayores de 15 mg/dL se con-
sideran una emergencia médica que debe ser
Con hipercalcemia leve los pacientes experi- tratada en forma agresiva. Tan elevados ni-
mentan fatiga; con niveles séricos mayores veles sugieren la presencia de un gran adeno-
presentan ansiedad, depresión, cambios en ma o de un carcinoma paratiroideo.
la personalidad y confusión. Los síntomas en
el sistema nervioso central se deben al efecto
depresor de la hipercalcemia. EPIDEMIOLOGÍA
En los riñones aparece nefrolitiasis como re- La hipercalcemia moderada es común y se
sultado de la hipercalciuria. La función renal presenta con mayor frecuencia en mujeres

666
CAPÍTULO VIII: HIPERCALCEMIA

posmenopáusicas. La incidencia de hiperpara- CAUSAS DE HIPERCALCEMIA


tiroidismo primario en la población general, la
principal causa de hipercalcemia, es de 1-2 1. Aumento en la ingestión o absorción
Síndrome de leche y alcalinos
casos por cada 1.000 adultos.
Exceso de vitamina D o A
2. Trastornos endocrinos
La morbilidad y la mortalidad dependen de la Hiperparatiroidismo primario (adenoma, hiperplasia,
causa. La hipercalcemia por hiperparatiroi- carcinoma)
dismo primario tiende a ser moderada y a per- Hiperparatiroidismo secundario (insuficiencia renal)
manecer por tiempo prolongado. La morbilidad Acromegalia
está relacionada con la enfermedad ósea re- Insuficiencia suprarrenal
sultante. 3. Enfermedad neoplásica
Tumores productores de peptidos similares a PTH
(ovario, riñón y pulmón)
Cuando la hipercalcemia está asociada con Metástasis óseas
una enfermedad maligna, sus tasas de morbili- Enfermedad linfoproliferactiva
dad y mortalidad son mayores, independien- Secreción de prostaglandina
te de las de la enfermedad neoplásica. 4. Diversas
Inducida por diuréticos del tipo tiacida
El mecanismo por el cual se produce hipercal- Sarcoidosis
cemia en pacientes con cáncer es mediado Enfermedad ósea de Paget
Hipofosfatasa
por la secreción ectópica de hormona parati-
Inmovilización
foidea por el tumor. Los tipos de cáncer más Hipercalcemia hipocalciúrica familiar
frecuentemente relacionados con hipercalce- Complicaciones del trasplante renal
mia son, en su orden, adenocarcinoma de cé- Iatrogenia
lulas pequeñas del pulmón, adenocarcinoma
de colón y adenocarcinoma de páncreas. Tomado de: Sánchez C, Patiño JF. Hipercalcemia. En: Guías para Manejo de
Urgencias. Ministerio de Salud, Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades de Medicina. Bogotá, 1996.

ETIOLOGÍA
CUADRO CLÍNICO
Noventa por ciento de los casos de hipercalce-
mia están asociados con hiperparatiroidismo Los síntomas pueden ser divididos según el
o con cáncer. Del porcentaje relacionado con sistema afectado
cáncer, el 80% se debe a metástasis óseas y
el 20% a los efectos de la producción ectópica Sistema nervioso central:
de hormona paratiroidea. • Letargia.
• Confusión.
Las causas de hipercalcemia se resumen en • Coma.
la siguiente tabla:
Sistema renal:
• Poliuria.
• Nicturia.
• Cólico renal.

667
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Sistema gastrointestinal: En general, la hipercalcemia de por sí es indi-


• Estreñimiento. cación para tratamiento. Los pacientes con
• Náuseas. concentraciones superiores a 12 mg/mL ge-
• Anorexia. neralmente se hospitalizan.
• Dolor abdominal (gastritis, pancreatitis).
EXPANSIÓN DE VOLUMEN
En el examen físico no suelen encontrarse Y DIURESIS SALINA
signos de enfermedad. Los pacientes con ni-
veles de calcio sérico mayores de 12 mg/dL Los pacientes con hipercalcemia usualmente
pueden exhibir los siguientes hallazgos: se hallan deshidratados. El fundamento del
manejo de la hipercalcemia es la expansión
Sistema nervioso central: del líquido extracelular con soluciones isotóni-
• Confusión. cas. El objetivo es aumentar la excreción uri-
• Hipotonía. naria de calcio. Se utiliza solución salina nor-
• Hiporreflexia. mal, en cantidades de 5-10 litros/24 horas,
• Paresias. para producir una diuresis de no menos de
• Coma. tres litros diarios.

Sistema gastrointestinal: Una vez lograda la expansión del líquido extra-


• Impactación fecal. celular, se pueden utilizar diuréticos como la
• Signos de pancreatitis. furosemida, que aumentan la eliminación re-
nal de calcio. La dosis usual de furosemida
Sistema cardiovascular: en casos de hipercalcemia grave es de 20-40
• Arritmias. mg cada 2-3 horas.
• Hipotensión.
• Intervalo QT corto en el electrocardiograma. MOVILIZACIÓN

Es perentorio recomendar a los pacientes no


EXÁMENES DE LABORATORIO permanecer mucho tiempo en cama. La in-
movilidad empeora la hipercalcemia.
La mayoría de los pacientes con hipercalcemia
se encuentran asintomáticos en momento del DISMINUCIÓN DE LA ABSORCIÓN
diagnóstico. La única forma de evidenciar esta INTESTINAL DE CALCIO
patología es mediante la determinación del nivel
del calcio sérico total y, si se encuentra disponi- Los corticoides disminuyen la absorción intes-
ble, del calcio iónico. Si se documenta hipercal- tinal de calcio. Se puede utilizar hidrocortisona
cemia, el paso siguiente es solicitar niveles de en dosis de 3-4 mg/kg de peso al día. Tam-
hormona paratiroidea para detectar hiperparati- bién puede usarse prednisona en dosis de 1
roidismo, la causa más común de hipercalcemia. mg/kg/día.

INHIBICIÓN DE LA RESORCIÓN ÓSEA


TRATAMIENTO
La resorción ósea puede inhibirse con los si-
El tratamiento de la hipercalcemia depende guientes medicamentos:
de los síntomas y de la causa que la produce.

668
CAPÍTULO VIII: HIPERCALCEMIA

• Bifosfonados: como el alendronato o el LECTURAS RECOMENDADAS


pamidronato. La dosis del alendronato es
de 40 mg al día por vía oral; la del pamidro- 1. Calvo-Romero JM, Bonilla-Gracia MC. Severe
nato es de 90 mg al día por vía intravenosa. symptomatic hypercalcaemia. Postgrad Med J
• Calcitonina: en dosis de 50 UI cada 12 2000; 76:662- 668.
2. Chou FF, Lee CH, Chen HY, et al. Persistent and
horas.
recurrent hyperparathyroidism after total parathy-
• Mitramicina: se usa sólo en casos de hiper- roidectomy with autotransplantation. Ann Surg
calcemia asociada con cáncer. La dosis es 2002; 235:99-104.
de 24 mg/kg de peso. El efecto dura entre 3. Goudet P, Cougard P, Verges B, et al. Hyperpara-
tres y siete días. thyroidism in multiple endocrine neoplasia type I:
surgical trends and results of a 256-patient series
from Groupe D’etude des Neoplasies Endocri-
niennes Multiples Study Group. World J Surg 2001;
INDICACIONES 25:886-890.
DE HOSPITALIZACIÓN 4. Lundgren E, Lind L, Palmer M, et al. Increased
cardiovascular mortality and normalized serum
Los pacientes con niveles mayores de calcio calcium in patients with mild hypercalcemia follo-
sérico mayores de 12 mg/dL deben ser hospi- wed up for 25 years. Surgery 2001; 130:978-985.
talizados para determinar la causa de hipercal- 5. Nilsson IL, Rastad J, Johansson K, Lind L. Endo-
cemia. También es conveniente hospitalizar a thelial vasodilatory function and blood pressure
aquellos pacientes que presenten signos o response to local and systemic hypercalcemia.
Surgery 2001; 130:986-990.
síntomas del sistema nervioso central, así
6. Rizzoli R, Thiebaud D, Bundred N, et al. Serum
como a aquellos con alteración de la función parathyroid hormone-related protein levels and
renal. response to bisphosphonate treatment in hyper-
calcemia of malignancy. J Clin Endocrinol Metab
1999; 84:3545-3550.
7. Vella A, Gerber TC, Hayes DL, Reeder GS.
Digoxin, hypercalcaemia, and cardiac conduction.
Postgrad Med J 1999; 75:554-556.

669
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IX

Hipocalcemia

María de los Angeles Roversi, MD


Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina
Bogotá

Efraím Otero Ruiz, MD


Sección de Endocrinología,
Fundación Santa Fe de Bogotá
Miembro de Número,
Academia Nacional de Medicina de Colombia
Bogotá

L os síntomas agudos de hipocalcemia son


causa ocasional de consulta a los servi-
cios de urgencia. Pero en los hospitales con
principales de la paratiroides existe un recep-
tor-sensor de calcio (CaR) que detecta la con-
centración extracelular de calcio ionizado y
servicios activos de cirugía endocrina, son regula la secreción de PTH: a mayor calcemia,
más frecuentes las consultas por pacientes menor secreción y viceversa (calcióstato).
que han sido sometidos a cirugía de tiroides
o de paratiroides. Aproximadamente 500 mg de calcio son re-
movidos de los huesos diariamente y rempla-
zados por una cantidad igual. La acción pro-
FISIOPATOLOGÍA fosfatúrica en el túbulo renal también influye,
pues la homeostasis depende del producto Ca
El esqueleto de un individuo de 70 kg contie- x P (calcio x fósforo) en la sangre: si se eleva
ne aproximadamente 1.000 gramos de calcio el fosfato, baja el calcio y viceversa. La calce-
(99%); el restante 1% (extracelular) se distri- mia se relaciona, además, con la proteinemia
buye en las siguientes fracciones: 50% está total y con el estado ácido-base del paciente,
unido a proteínas plasmáticas, principalmen- puesto que la acidosis aumenta la fracción de
te la albúmina; 10% forma complejos con anio- calcio ionizado al separarlo de la albúmina,
nes séricos (fosfatos, bicarbonato, citrato y mientras que en la alcalosis los niveles de
lactato) y 40% se encuentra de manera libre calcio ionizado disminuyen.
(calcio ionizado), que es la forma fisiológica-
mente activa y cuya concentración está ínti- El calcio ionizado participa en numerosas re-
mamente regulada por la parathormona (PTH) acciones enzimáticas, es requerido en el pro-
y la vitamina D que modulan la movilización ceso de excitación-contracción necesario para
hacia y desde el cristal óseo, la absorción in- la contracción muscular y la conducción ner-
testinal y la excreción renal. En las células viosa, en la integridad y estabilidad de las

670
CAPÍTULO IX: HIPOCALCEMIA

membranas celulares, en la activación de re- Se considera hipocalcemia cuando el nivel


ceptores, la agregación plaquetaria y la fun- sérico calcio ionizado es inferior a 4 mg/dL
ción inmunitaria, además de diferentes pro- (1,00 mMol/L) o el de calcemia menor de 8,4
cesos de secreción endo y exocrina. La irrita- mg/dL (2,10 mMol/L). Por la constante home-
bilidad muscular depende de la relación en el ostática de Ca x P arriba mencionada, la cal-
plasma de la suma de los iones de calcio, mag- cemia tiene relación con los niveles de fósfo-
nesio e hidrógeno respecto a la de los electro- ro. De ahí que en cada paciente sea necesa-
litos sodio y potasio (los del numerador dismi- rio solicitar simultáneamente calcemia y fosfo-
nuyen y los del denominador aumentan la irri- remia (valores normales de fósforo en plas-
tabilidad) así: ma: 3,0 a 4,5 mg/dL o 1,0 a 1,50 mmol/L,
Conn´s Current Therapy 2003, Saunders,
Ca++ + Mg++ + H+ Philadelphia, 2003).
Na+ + K+
b. Proteinemia: si no es posible determinar
directamente el calcio ionizado, se debe de-
EPIDEMIOLOGÍA terminar la proteinemia y la concentración
de albúmina sérica, a la cual se encuentra
En la práctica la hipocalcemia se presenta con ligado el calcio, ya que una disminución
menor frecuencia que la hipercalcemia y con apreciable en la albúmina sérica disminu-
igual incidencia en los dos sexos. En la infan- ye los niveles de calcio.
cia se debe a deficiencias nutricionales y en
la edad adulta principalmente a falla renal. Fosforo: La hormona paratiroidea (PTH) es-
Otras causas de hipocalcemia se detallan timula la excreción renal de fósforo en perso-
posteriormente. nas con riñones sanos. Pacientes con falla
renal inicial por lo general presentan hiperfos-
fatemia e hipocalcemia; esta última, secun-
EXÁMENES DE LABORATORIO dariamente, lleva a niveles elevados de PTH
(hiperparatiroidismo secundario).
a. Calcemia: Calcemia normal (Conn´s
Current Therapy 2003, Saunders, Niveles de PTH: Valores normales 10 a 72
Philadelphia, 2003): pg/mL. Niveles normales o bajos de PTH se
8,4 a 10,6 mg/dL (2,10 a 2,65 mMol/L). Para evidencian en hipoparatiroidismo y en pacien-
convertir miligramos a milimoles multiplicar tes con severa hipomagnesemia. En pacien-
x 0,250 y miligramos a miliequivalentes tes con resistencia a la PTH (pseudohipopa-
multiplicar por 0,5. ratiroidismo) se registran valores elevados de
Calcio iónico (difusible): 4,25 a 5,25 mg/dL esta hormona, por encima de los 75 pg/mL;
(1,05 a 1,30 mMol/L). por el amplio rango de variaciones normales
su valor diagnóstico en casos de hipocalcemia
Estos valores cambian según el laboratorio. es muy limitado.
En el Hospital Universitario de la Fundación
Santa Fe de Bogotá los valores de calcemia Magnesio: 1,3 a 2,1 mg/dL (0,65 a 1,05 mmol/
normal: L), según Conn´s Current Therapy 2003,
Calcio total: 8,5-10,5 mg/dL (2,35-255 Saunders, Philadelphia, 2003. No es necesa-
mmol/L) ria su determinación de rutina.
Calcio ionizado: 1,16-1,32

671
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MANIFESTACIONES CLÍNICAS hipocalcemia. El signo de Trousseau es un


espasmo doloroso del carpo, que se presen-
Los siguientes antecedentes pueden hacer ta luego de mantener por tres minutos una
sospechar hipocalcemia: presión >20 mmHg por encima de la sistólica,
siendo un signo más específico de tetania.
• Diarrea crónica o enfermedades inflamato-
rias intestinales como ileítis regional (en- La hipocalcemia crónica se presenta con irri-
fermedad de Crohn), sprue tropical o pan- tabilidad, confusión, demencia e incluso, en
creatitis crónica, conducentes a esteato- infantes, como retardo mental. También se
rrea, sugieren la posibilidad de hipocalce- reportan movimientos coreicos, distonías y
mia mediada por malabsorcion de calcio y/ convulsiones. Se ha reportado calcificación de
o vitamina D. ganglios basales en la radiografía de cráneo,
• Ingesta de inhibidores de la lipasa intesti- que no es reversible al tratamiento.
nal (orlistato, XenicalÆ), como medicación
para adelgazar, con la subsiguiente estea- Cardiovascular: prolongación de la fase de
torrea y malabsorción de vitamina D. potencial de acción y por lo tanto prolonga-
• Presencia de falla renal aguda o crónica ción del segmento ST en el ECG. En casos
(fases tempranas). de severa deficiencia se presentan arritmias,
• Cirugías previas de cuello que puedan ha- hipotensión o falla cardiaca; la hipocalcemia
ber llevado a hipoparatiroidismo, transito- aumenta la cardiotoxicidad de los digitálicos.
rio (cirugía reciente) o definitivo (cirugías
antiguas). Pulmonar: broncoespasmos y laringoespas-
• Ingesta deficiente de vitamina D, particu- mos vistos, sin embargo, con poca frecuencia.
larmente en ancianos.
• Historia familiar de hipocalcemia. Dermatológica : piel seca, uñas quebradizas
• Déficit en la ingesta de nutrientes ricos en y caída del cabello como signos no específi-
calcio (leche y derivados, legumbres, ce- cos en la hipocalcemia crónica.
reales, carne).
• Insuficiente exposición solar por razones
de trabajo (mineros) o residencia en áreas CAUSAS DE HIPOCALCEMIA
cercanas a los polos.
DEFICIENCIA DE PTH

SINTOMATOLOGÍA • Hipoparatiroidismo primario: es una entidad


rara, puede ser familiar, trastorno genético
Neuromuscular: la hipocalcemia aguda se de tipo autosómico dominante o recesivo,
manifiesta por parestesia (hormigueo y ador- así como una forma ligada al sexo (al
mecimiento de los dedos y región peribucal) cromosoma X).
y calambres o contracturas musculares. La • La enfermedad de DiGeorge, más rara aún,
sintomatología subclínica de tetania, eviden- es una ausencia congénita de la tercera y
ciada por el signo de Chvostek, (ocurrencia cuarta bolsas branquiales, que determina
de espasmo facial, especialmente del orbicular agenesia tímica y paratiroidea, asociada
de los labios, al percutir el nervio facial a mi- con alteraciones cardiacas congénitas, pa-
tad de distancia entre la comisura labial y el ladar hendido y facies anormal; cursa tam-
oído); no es, sin embarg, patognomónica de bién con hipocalcemia severa.

672
CAPÍTULO IX: HIPOCALCEMIA

• Otra forma de hipoparatiroidismo se pre- HIPOMAGNESEMIA


senta en el—síndrome poliglandular auto-
inmune tipo I. Una severa hipomagnesemia puede precipitar
• El hipoparatiroidismo materno puede cau- una hipocalcemia, resistente a la corrección con
sar hipoplasia paratiroidea fetal con hipo- calcio y vitamina D. Estos pacientes presentan
calcemia transitoria en el recién nacido. secreción inadecuada o normal de PTH, con
• Hipoparatiroidismo secundario: más común resistencia ósea y renal a la acción de esta hor-
que el anterior y por lo general iatrogénico, mona. La recuperación rápida de la calcemia
resulta de la remoción accidental de las pa- posterior a la administración de magnesio, hace
ratiroides o alteración en la suplencia vas- pensar que el trastorno se debe más a una dis-
cular durante la cirugía de paratiroides, tiroi- minución o supresión de la secreción de la PTH
des o carótidas. En esos casos, lo mismo que a un defecto en su síntesis.
que después de la extirpación de un ade-
noma paratiroideo puede presentarse hipo- DEFICIENCIA DE VITAMINA D
calcemia transitoria que revierte después
de tratamiento bien llevado, al ceder el La deficiencia de Vitamina D causa disminu-
edema y mejorar la cicatrización. ción en la absorción intestinal del calcio. Aun-
• Carcinomas metastásicos al cuello o enfer- que la PTH mantiene los niveles de calcio
medades infiltrativas (hemocromatosis, sar- sérico por un tiempo, la deficiencia de Vitami-
coidosis, enfermedad de Wilson) pueden na D causa también resistencia a la PTH a
destruir las paratiroides y causar hipocal- nivel óseo, lo que ayuda a la hipocalcemia. El
cemia. aumento de la PTH estimula la actividad osteo-
• Tanto la hipomagnesemia como la hiper- clástica y promueve la fosfaturia, fenómenos
magnesemia severa pueden alterar la se- que en conjunto potencian la desmineraliza-
creción de PTH. Así mismo drogas que su- ción ósea, produciendo osteomalacia y lesio-
priman la función paratiroidea como los nes subcorticales y epifisarias características
agentes quimioterapéuticos, la cimetidina (raquitismo). Arriba se han enumerado las
y el etanol en dosis intoxicantes. causas.

RESISTENCIA A LA PTH (PSEUDOHIPOPA- FALLA RENAL


RATIROIDISMO)
La hipocalcemia es frecuente en pacientes con
Síndrome familiar caracterizado por una resis- insuficiencia renal crónica, como resultado de
tencia renal a la PTH. Se debe a un defecto la falla tubular renal que produce retención de
en la unión hormona-receptor, que origina la fosfato y disminución en la producción de la
activación de una proteína G aumentando la forma activa de la vitamina D. Generalmente
producción de AMPciclico. Se caracteriza por son asintomáticos, posiblemente por el efec-
presentar fenotipo característico (talla baja, to protector de la acidosis metabólica y por la
obesidad, braquidactilia); hay hiperplasia para- hiperplasia paratiroidea a que conduce la mis-
tiroidea y se diferencia del verdadero hipopa- ma hipocalcemia y que puede llevar a hiperpa-
ratiroidismo por los elevados niveles séricos ratiroidismo secundario. Sin embargo, la rápi-
de PTH. da corrección de la acidosis con bicarbonato
exógeno puede precipitar hipocalcemia seve-
ra, con tetania o convulsiones que deben ser
atendidas de urgencia.

673
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TERAPIA ANTICONVULSIVANTE Drogas ocasionalmente hipocalcemiantes:


• Agentes que inhiben la resorción ósea:
Los anticonvulsivantes del tipo ácido valproico calcitonina, estrógenos, bifosfonatos.
pueden estimular el sistema microsomal, ace- • Agentes quimioterapéuticos: cisplatino,
lerando la degradación y pérdida de la Vita- doxorubicina.
mina D. La fenitoína puede interferir también • Antimicrobianos: ketoconazol, penta-
con la absorción intestinal de la vitamina D. midine.
• Diuréticos: furosemida.
ENFERMEDADES CRÍTICAS
PANCREATITIS AGUDA
En pacientes en unidades de cuidado intensi-
vo, se ha observado hipocalcemia sin que En esta patología se reduce la secreción de
pueda precisarse la causa. PTH, desvirtuando en gran parte la idea de
que la hipocalcemia se debe a la saponifica-
SÍNDROME DEL HUESO HAMBRIENTO ción del calcio por las grasas hidrolizadas por
la lipasa durante la inflamación.
Posterior a cirugías para tratamiento de hiper-
paratiroidismo o a la corrección de tirotoxicosis
se evidencia un imbalance entre resorción y ESTUDIOS DE IMÁGENES
formación ósea que se asocia con hipocalce-
mia, hipofosfatemia e hipomagnesemia. La radiografía ósea muestra alteraciones aso-
ciadas con osteomalacia o raquitismo, se evi-
HIPOCALCEMIA NEONATAL dencian como zonas hipodensas en cadera,
cabeza del fémur y costillas. A veces apare-
El recién nacido a término es hipercalcémico cen calcificaciones basales en el cráneo.
con elevados niveles de calcitonina y bajos
de PTH. Se registra descenso de la calcemia Las metástasis óseas (cáncer de seno, prós-
sobre el cuarto día. Una hipocalcemia neona- tata y pulmón) pueden rara vez causar hipocal-
tal temprana (menos de tres días), se presen- cemia, por producción de péptidos hipocalce-
ta en niños hijos de madre diabéticas o hipopa- miantes.
ratiroideas, infantes pretérmino o que han su-
frido asfixia neonatal. El mecanismo de este
fenómeno no esta claro. TRATAMIENTO
La hipocalcemia neonatal tardía (5-10 días) HIPOCALCEMIA AGUDA
predomina en recién nacidos a término que
no han sufrido asfixia perinatal, relacionándo- Administrar 10-20 mL de gluconato de calcio
se con ingesta de leche de vaca, que contie- al 10% (9,3mg/mL) en 50–100 mL de dextro-
ne 3-4 veces mas fósforo que la materna. sa al 5%, bajo vigilancia electrocardiográfica;
Como el riñón del niño es inmaduro y resisten- después, administrar 15-20 mg de calcio ele-
te al efecto fosfatúrico, se produce disminu- mental/kg en 1.000 mL de dextrosa al 5% en
ción de la calcemia. un periodo de 8-12 horas.

Determinar el calcio sérico cada 4–6 horas,


con el fin de observar la respuesta al trata-

674
CAPÍTULO IX: HIPOCALCEMIA

miento y decidir el momento en que se pueda HIPOCALCEMIA CRÓNICA


cambiar la preparación a vía oral.
El tratamiento depende de la etiología del tras-
Los pacientes con arritmias cardíacas o en torno:
tratamiento con digoxina requieren monitori-
zación cardiaca continua. Deficiencia de PTH: pacientes con hipoparati-
roidismo, son manejados inicialmente con
El cloruro de calcio al 10% aporta mayor can- grandes dosis orales de calcio (1.500 a 2.000
tidad de este mineral (22,7 mg/mL), por lo que mg/día); los preparados orales suelen venir
la corrección es más rápida. Debido a que asociados con vitamina D. Si el hipoparatiroi-
produce flebitis, se recomienda administrar por dismo es severo deben añadirse 0,25 a 0,50
vía catéter central. microgramos diarios de 1-25-dihidroxi-vitami-
na D3 (calcitriol).
En recién nacidos y niños se recomienda dar
0,5-1 mL/kg/hora de gluconato de calcio al Falla renal: para la hipocalcemia de pacien-
10% cada 5 minutos. tes en diálisis, se administra carbonato de
calcio oral (500 mg de calcio elemental) tres
Tratamiento con calcio y vitamina D por 1-2 veces por día, debiendo controlarse los nive-
días previos a la paratiroidectomía, ayuda a les de fosfato.
prevenir el desarrollo de hipocalcemia. En
pacientes en postoperatorio inmediato de En pacientes con hipocalcemia y falla renal
paratiroidectomía, o síndrome del hueso ham- crónica, la ingesta de fosfatos debe
briento, se deben dar calcio y vitamina D por mantenerse entre 400–800 mg/día.
vía oral de manera temprana.

Los efectos adversos más comunes son hiper- LECTURAS RECOMENDADAS


tensión, náuseas, vómitos y rash.
1. Carlstedt F, Lind L. Hypocalcemic syndromes. Crit
Si se produce extravasación puede causar irri- Care Clin 2001; 17:139-153.
tación y/o necrosis tisular, por lo que el caté- 2. Gibbs M, Wolfson A, Tayal V. Electrolyte
disturbances. En: Rosen´s Emergency Medicine.
ter venoso debe ser el adecuado para la edad
Concepts and Critical Practice. J Marx, Hockberg
y el calibre del vaso, recomendándose vigi- R, Walls R, et al (eds). Fith edition. Mosby. St
lancia permanente. Louis,1998.
3. Kapoor M, Chan GZ. Fluid and electrolyte
Si la sintomatología es refractaria o se detec- abnormalities. Crit Care Clin 2001; 17:503-529.
ta hipomagnesemia, se administrarán 2-4 gra- 4. Lind L, Carlstedt F, Rastad J, et al. Hypocalcemia
mos de sulfato de magnesio al 10% IV. En and parathyroid hormone secretion in critically ill
pacientes asintomáticos, se recomienda la patients. Crit Care Med 2000; 28:93-99.
5. Lo CY. Postthyroidectomy hypocalcemia. J Am
suplementación diaria de 1–4 g de calcio ele-
Coll Surg 2003; 196:497-498.
mental fraccionado en varias dosis. Los pre- 6. Marx SJ. Hyperparathyroid and hypoparathyroid
parados orales suelen venir en forma de car- disorders.N Engl J Med 2000; 343:1863-1875.
bonato de calcio en tabletas que contienen 600 7. Pegoraro A, Rutecki G. Hypocalcemia. Emedicine
mg de calcio elemental. 2002. disponible en http://www.emedicine.com/
med/topic1118.htm

675
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

8. Prough DS. Physiologic acid-base and electrolyte 11. Wilson RB, Erskine C, Crowe PJ. Hypo-
changes in acute and chronic renal failure patients. magnesemia and hypocalcemia after
Anesthesiol Clin North America 2000; 18:809-833. thyroidectomy: prospective study. World J Surg
9. RuDusky BM. ECG abnormalities associated with 2000; 24:722-726.
hypocalcemia. Chest 2001; 119:668-669. 12. Tfelt-Hansen J, Schwarz P, Brown EM,
10. Seinder D, Licata A. Parenteral nutrition- Chattopadhyay N. The calcium-sensing receptor
associated metabolic disease: pathophysiology, in human disease. Front Biosci 2003; 18:377S-
evaluation, and treatment. NPC 2000; 15:163-170. 390S.

676
CAPÍTULO X: HIPOKALEMIA

CAPÍTULO X

Hipokalemia

Eduardo Carrizosa Alajmo, MD


Jefe, Sección de Nefrología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

S e considera hipokalemia la concentración


sérica de potasio inferior a 3,5 mEq/L.
Hipomagnesemia
Pérdidas gastrointestinales
Vómito
La hipokalemia puede resultar de deficiencia Diarrea
Succión nasogástrica
del potasio corporal total o de la migración Aumento de fijación intracelular
intracelular del potasio. Pérdida por sudoración
Pérdida durante diálisis
Depleción de potasio sin hipocalemia
ETIOLOGÍA
Se puede llegar a una pérdida de potasio por
distintas condiciones clínicas que van desde BAJO SUMINISTRO
la mala ingesta de potasio, a un aumento en
las pérdidas renales o gastrointestinales o por La dieta normal suministra 40-120 mEq/día de
situaciones que fijen el potasio dentro de la potasio, con un promedio de 80 mEq. La ma-
célula. yor parte, unos 70 mEq, se elimina por el ri-
ñón. La excreción en las heces es de apenas
5 a 10 mEq y por la piel 1 mEq. Pero en pa-
CUADRO No. 1. Causas de hipokalemia cientes con cáncer con frecuencia se presen-
ta hipokalemia por mayores pérdidas gastro-
Bajo suministro intestinales y urinarias.
Dieta baja en potasio
Hidratación parenteral sin potasio
Pérdidas urinarias
En una dieta carente de K, siempre habrá eli-
Diuréticos minación de potasio por la orina, en una can-
Acidosis tubular distal tidad de 5-25 mEq/día y, por lo tanto, con el
Exceso de mineralocorticoides tiempo llevará a hipokalemia.
Síndrome de Liddle
Síndrome de Barter En pacientes en estado crítico en quienes no
Síndrome de Gitelman se hace reposición de potasio también se pro-
Estados poliúricos
duce hipokalemia.
Anfotericina B

677
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PÉRDIDAS URINARIAS día, con un contenido de potasio de 5-10 mEq/


día. En los estados patológicos, en que au-
En el Cuadro No. 1 aparece un listado de menta la secreción y disminuye la absorción
síndromes inherentes al manejo de potasio por (vómito, diarrea, fístulas intestinales, succio-
parte del riñón, cuyo cuadro clínico está re- nes o drenajes, adenoma velloso, abuso de
lacionado con depleción del potasio. Dichas laxantes), las pérdidas de potasio pueden lle-
situaciones son raras en la práctica médica y var a hipokalemia marcada.
son de directa competencia del nefrólogo.

En la práctica médica la situación más frecuen- AUMENTO DE FIJACIÓN


te esta relacionada con el empleo de diuréti- INTRACELULAR
cos de asa o tiazídicos.
Hay cuadros clínicos que cursan con hipokale-
También en los excesos de mineralocorticoi- mia, siendo el K corporal total normal, debido
des, como en el hiperaldosteronismo primario a que se aumenta la fijación de potasio den-
(hiperplasia, adenoma o carcinoma de la glán- tro de las células (Cuadro No. 2).
dula suprarrenal) en que, por efecto de la
aldosterona, se disminuye la reabsorción de El ejemplo que se observa con mayor frecuen-
potasio con la consecuente hipokalemia. Simi- cia es el de los estados de alcalosis metabó-
lar situación se da en pacientes con estados lica, en los cuales ocurre una disminución del
de hiperreninismo (estenosis de la arteria re- potasio plasmático de 0,4 mEq/L por cada 0,1
nal, tumor secretor de renina) y la ingesta cró- unidades que aumente el pH extracelular. En
nica de corticoides fluorinados. los estados de cetoacidosis diabética, el su-
ministro de insulina promueve la incorporación
La producción de grandes volúmenes de orina, de potasio a la célula por aumento de la acti-
como la que ocurre después de desobstrucción vidad de la bomba Na-K ATPasa.
de la vía urinaria, en la diabetes insípida nefro-
génica o neurológica, en los bebedores compul- Los casos que cursan con aumento de cateco-
sivos de agua, en los estados hiperosmolares laminas (actividad beta adrenérgica elevada),
(glucosa, manitol, úrea), lleva a hipokalemia por ya sea inducido por estrés o por suministro
aumento en la eliminación urinaria. de epinefrina, producen desplazamiento del
K extracelular al espacio intracelular por acti-
En la mitad de los pacientes que requieren vidad de la bomba Na-K ATPasa. En la prácti-
anfotericina B, se encuentra hipokalemia, por ca médica se observa en la reanimación car-
un aumento en la permeabilidad de membra- diopulmonar, delirium tremens y en la admi-
na por una acción directa del medicamento. nistración de agonistas b-adrenérgicos (terbu-
talina, dobutamina, albuterol). Los agonistas
b-adrenérgicos son tan efectivos en el despla-
PÉRDIDAS GASTROINTESTINALES zamiento del potasio, que su uso está indica-
do en los estados de hiperkalemia.
Normalmente una persona produce de tres a
seis litros de líquido en el aparato digestivo, En las crisis tirotóxica hay un aumento de la
compuestos por la secreción por parte del hí- sensibilidad a las catecolaminas con disminu-
gado, páncreas e intestino. En las heces se ción de la concentración plasmática de
excretan solamente 100 a 300 mL de agua al potasio.

678
CAPÍTULO X: HIPOKALEMIA

CUADRO No. 2. SITUACIONES CLÍNICAS QUE CURSAN CUADRO No. 3. MANIFESTACIONES CLÍNICAS
CON HIPOKALEMIA DE LA HIPOKALEMIA

Alcalosis metabólica Músculo estriado: parálisis, calambres.


Cetoacidosis diabética Músculo liso: íleo paralítico.
Activación beta-adrenérgica Miocardio: extrasístoles ventriculares, bradicardia sinusal, bloqueo
Parálisis periódica familiar auriculo-ventricular, taquicardia ventricular, fibrilación ventricular.
Tirotoxicosis Renal: poliuria, polidipsia, incapacidad de concentración, inca-
Estimulación hematopoyética pacidad para producir amonio y acidificar la orina, incapacidad
Hipotermia para reabsorber bicarbonato, insuficiencia renal inducida por
Intoxicación por bario y cloroquina rabdomiólisis.

PÉRDIDAS POR SUDOR DIAGNÓSTICO


La concentración de potasio en el sudor sue- La historia clínica debe orientar a la identifi-
le ser de 5-10 mEq/L; sin embargo, cuando la cación de la causa de la pérdida de potasio.
pérdida es crónica, como puede suceder en
climas cálidos o en el ejercicio extremo con La medición del potasio urinario permite dife-
presencia de rabdomiolisis, puede presentar- renciar entre varias etiologías. Cuando es
se depleción de potasio. El aumento en la menor de 25 mEq/día, debe sospecharse uso
secreción de aldosterona puede contribuir, de diuréticos o pérdidas gastrointestinales.
cuando las pérdidas de volumen y sal no son
remplazadas en forma rápida. Cuando es mayor de 30 mEq/día el siguiente
paso es solicitar actividad de renina plasmá-
tica, que puede ser:
PÉRDIDA DURANTE DIÁLISIS
• Alta o normal, lo que hace pensar en hiper-
Los pacientes en insuficiencia renal crónica tensión arterial maligna, hipertensión reno-
suelen tener una dieta carente de potasio. Los vascular, tumor secretor de renina, riñón
líquidos de hemodiálisis generalmente son perdedor de sodio y síndrome de Cushing.
carentes de potasio y los ultrafiltrados en diáli- • Baja, obliga solicitar determinación de
sis peritoneal crónica pueden ser de 30 mEq/ aldosterona que, de ser baja, hace pensar
día. Se suma la frecuente pérdida que puede en ingesta de licorice o deficiencias en la
presentarse por vómito y diarrea. hidroxilación. De estar elevada, hace pen-
sar en hiperaldosteronismo primario.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS
TRATAMIENTO
En términos generales se considera que los
síntomas deben aparecer cuando las concen- En el manejo de cualquier trastorno hidroelec-
traciones de potasio están entre 2,5-3 mEq/L. trolítico lo más importante es hacer el diag-
nóstico de la posible causa.
Las principales manifestaciones se observan
en el músculo estriado y el miocardio. Hacer un cálculo de la pérdida total de potasio
resulta incierto por tratarse de un catión

679
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

intracelular, lo que no ocurre con el Na. Si el En la hipokalemia inducida por trastornos


potasio sérico desciende de 4-3 mEq/L, impli- endocrinos, la corrección definitiva se logra
ca una pérdida de entre 200-400 mEq/L. Lo con el control de la enfermedad de base. En
ideal, no siempre posible, es corregir el déficit los pacientes que cursan con hiperaldostero-
por vía oral, teniendo en cuenta que la dieta nismo primario la droga de elección es la
normal en potasio es de 1 mEq/Kg/día. espironolactona.

En los casos de parálisis periódica familiar el


suministro de 60 a 120 mEq de KCl por vía LECTURAS RECOMENDADAS
oral suele ser suficiente para corregir el pro-
blema en un término de tiempo inferior a 30 1. Kamel K. Quaggin S. Scheich A. Disorders of
minutos. potassium homeostasis. Am J Kidney Dis 1994;
24:597-613
2. Kamel S, Halperin M. Treatment of hypokalemia
Perdidas inducidas por el uso de diuréticos, and hyperkalemia. En: Therapy in Nephrology and
gastrointestinales o urinarias, se remplazan Hypertension.Editado por H Brady, C Wilcox. WB
con el suministro de potasio intravenoso (clo- Saunders Company. Philadelphia, 1999.
ruro de potasio) por vena periférica entre 2-5 3. Kapor M, Chan GZ. Fluid and electrolyte
mEq/hora. En caso de requerirse dosis ma- abnormalities. Crit Care Clin 2001; 17:503-529.
4. Rose B, Post T. Hypokalemia. Clinical Physiology
yores, a una rata máxima que no supere los of Acid-Base and Electrolyte Disorders. McGraw-
20 mEq/hora, se debe aplica por catéter cen- Hill. Nueva York, 2001.
tral y bajo monitorización cardiaca en una uni- 5. Schaefer M. Link J. Hammenmann L. Excessive
dad de cuidados intermedios. hypokalemia and hyperkalemia following head
injury. Intens Care Med. 1995; 21:235-237.

680
CAPÍTULO XI: HIPERKALEMIA

CAPÍTULO XI

Hiperkalemia

Eduardo Carrizosa Alajmo, MD


Jefe, Sección de Nefrología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN Cirugía cardiaca


Inducida por medicamentos
Disminución de la excreción urinaria
S e considera que hay hiperkalemia cuan-
do los valores séricos de potasio son su-
periores a 5,2 mEq/L.
Insuficiencia renal
Depleción volumen efectivo
Hipoaldosteronismo
Acidosis tubular tipo I
Defecto selectivo en la excreción de potasio
ETIOLOGÍA
Cuadro No. 1. Causas de hiperkalemia
+
El K ingresa al organismo normalmente por
la vía oral, o en pacientes por la vía parenteral,
para ser incorporado dentro de las células; en SUMINISTRO AUMENTADO
caso de salida del espacio intracelular, apa-
rece la hiperkalemia. Una ingesta de potasio mayor de 160 m/Eq
puede poner en peligro la vida de la persona
Su principal vía de excreción es la renal y muy por desarrollo de arritmias cardiacas. La apli-
escasa por la vía gastrointestinal. Por lo tan- cación de infusión muy rápida de cloruro de
to, alteraciones en la excreción renal produ- potasio a través de transfusión sanguínea de
cen hiperkalemia (Cuadro No. 1). sangre almacenada por tiempo prolongado,
tiene el mismo efecto.
Los desplazamientos al espacio intersticial
puede ser agudos o crónicos, y de ello de-
penderá la sintomatología. PASO AL ESPACIO EXTRACELULAR

Suministro Aumentado Falsa hiperkalemia. También se conoce como


Oral pseudohiperkalemia, y se observa especial-
Intravenoso mente en la obtención de muestras para el
Paso al espacio extracelular
laboratorio por toma inadecuada de la mues-
Falsa hiperkalemia
Acidosis metabólica tra (torniquete; verter la sangre con la aguja
Deficiencia de insulina puesta, que produce hemólisis de los glóbu-
Catabolismo celular los rojos).
Bloqueadores beta adrenérgicos
Ejercicio de alta demanda Las entidades que cursan con aumento de
Parálisis periódica familiar leucocitos (100.000 o más) o trombocitosis

681
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

(400.000 o más) pueden exhibir un aumento EJERCICIO DE ALTA DEMANDA


del K+ sérico, o en casos de coágulos por sa-
lida del K+ de las plaquetas. Durante el ejercicio extremo se produce inhi-
bición de la bomba Na-K ATPasa. El potasio
sérico aumenta y hay acidosis láctica. La ele-
ACIDOSIS METABÓLICA vación aguda del potasio, que en algunos in-
dividuos puede llegar a ser de 2 mEq/L, ha
Los estados acidóticos producen movimiento sido asociada con casos de muerte súbita en
del K+ intracelular al espacio extracelular para deportistas de alto rendimiento. En los corre-
mantener la electroneutralidad, por la incor- dores de maratón se asocia con rabdomiolisis.
poración de hidrogeniones a la célula. El au-
mento del K+ plasmático es muy variable, os-
cila entre 0,2 y 1,7 m/Eq/L por cada 0,1 que PARÁLISIS PERIÓDICA FAMILAR
descienda el pH arterial.
En estos casos, la hiperkalemia es inducida
por el ejercicio o por la ingesta aumentada de
DEFICIENCIA DE INSULINA K+. Suele estar asociada con disminución del
Na+ sérico.
Normalmente la insulina promueve el paso de
K+ hacia el interior de la célula. Por cada gra-
mo de glucosa que pasa a glicógeno, arrastra CIRUGÍA CARDIACA
0,3 m/Eq de K+ al interior de la célula; por tan-
to, en estados de hiperglicemia o de cetoaci- Se puede observar hiperkalemia cuando se
dosis diabética, hay aumento del K + sérico. cierra la circulación extracorpórea, por salida
de K+ de las áreas isquémicas y por la hipo-
termia inducida. Los pacientes que previamen-
CATABOLISMO CELULAR te están recibiendo bloqueadores beta
adrenérgicos son más susceptibles.
En casos de trauma mayor, lisis tumoral, ad-
ministración de agentes citotóxicos, hemólisis
masiva, hipotermia severa, se presenta hiper- INDUCIDA POR MEDICAMENTOS
kalemia, tan severa que puede llevar a la
muerte. • Digital: produce inhibición de la bomba Na-
K ATPasa en dosis altas.
• Succinilcolina: relajante muscular que
BLOQUEADORES BETA ADRENÉRGICOS despolariza la membrana celular cambian-
do la carga eléctrica intracelular, producien-
Los receptores beta adrenérgicos facilitan la do salida del potasio.
incorporación del K+ dentro de la célula, en • Heparina: reduce la secreción de aldoste-
tanto que los bloqueadores beta adrenérgicos rona por acción directa sobre la glándula
interfieren con este mecanismo. Si la función suprarrenal, efecto que se observa des-
renal está conservada, se corrige fácilmente pués de cuatro días del suministro.
la situación. • Trimetropin sulfa: cierra los canales de
sodio pudiendo causar hiperkalemia.

682
CAPÍTULO XI: HIPERKALEMIA

• Ciclosporina, antiinflamatorios no este- ciclosporina A, diuréticos ahorradores de K+)


roideos y bloquedores de la enzima con- y en los estados de inmunodeficiencia adqui-
vertidora de angiotensina: disminuyen la rida. También se observa en los casos de in-
actividad del eje renina-angiotensina-aldos- suficiencia suprarrenal por deficiencia de
terona, produciendo hipoaldosteronismo e mineralocorticoides.
hiperkalemia.
• Diuréticos ahorradores de potasio: espi- El uso de heparina, especialmente en pacien-
ronolactona como antagonista directa de tes con insuficiencia renal crónica, puede re-
la aldosterona y el triamterene y el amelori- ducir la aldosterona hasta en 75% de los pa-
de por bloqueo directo de los canales de cientes.
sodio.

PSEUDOHIPOALDOSTERNISMO
DISMINUCIÓN
DE LA EXCRECIÓN URINARIA Es debido a enfermedades renales como nefri-
tis intersticial aguda o crónica, amiloidosis o
Insuficiencia renal. La insuficiencia renal nefropatia obstructiva. El daño del túbulo inters-
aguda suele cursar con hiperkalemia desde ticial impide la acción de la aldosterona; esta
cuando se inicia el daño, por disminución de situación siempre se relaciona con depleción del
la excreción renal de potasio, acidosis metabó- volumen circulatorio, pérdida de sodio, hiper-
lica y destrucción celular. La insuficiencia re- kalemia y aumento de la renina y la aldosterona.
nal crónica suele mostrar trastornos del K + en
estados avanzados de pérdida de la tasa de
filtración glomerular. Otros factores influyen, MANIFESTACIONES CLÍNICAS
como el hipoaldosteronismo y la resistencia
periférica a la insulina. Las manifestaciones están relacionadas con
alteraciones de la excitabilidad eléctrica de las
células del músculo esquelético (calambres,
DEPLECIÓN VOLUMEN EFECTIVO parálisis) y del miocardio (trastornos de la
conducción y de la repolarización).
La pérdida de volumen circulatorio, por tercer
espacio u otra causa, ocasiona mala perfu-
sión celular y disminución de la tasa de filtra- TRATAMIENTO
ción glomerular con reducción de la excreción
de K+, con elevación del K+ plasmático. Debe establecerse la magnitud de la hiperka-
lemia, la cual pone en peligro la vida del pa-
ciente si no se obra con prontitud. Los pacien-
HIPOALDOSTERONISMO tes con insuficiencia renal crónica toleran me-
jor las cifras elevadas de potasio; sin embar-
Se puede encontrar asociado con disminución go, cifras de o superiores a 7,5 mEq/L gene-
de la actividad del sistema renina-angioten- ralmente se asocian con manifestaciones se-
sina-aldosterona, como en los casos de hipo- veras que requieren pronta acción.
aldosterismo hiporreninémico, administración
de medicamentos (antiinflamatorios no este- El electrocardiograma es el examen que pone
roideos, inhibidores de la enzima convertidora, de presente la gravedad y la urgencia de

683
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

intervenir sobre la hiperkalemia. Si los cam- Diuréticos de asa y tiacidas: aumentan la


bios son de repolarización, hay tiempo para eliminación de potasio urinario en el túbulo
manejo con medicamentos que incorporan el contorneado distal.
potasio a la célula. Pero si los cambios son
de conducción, se requiere un manejo agre- Resinas de intercambio catiónico: efectúan
sivo que incluya la hemodiálisis (Cuadro # 2). el intercambian potasio por sodio, pueden pro-
ducir depleción de calcio y magnesio. Se usan
por vía oral, 20-30 gramos cada ocho horas,
Antagonistas de membrana con sorbitol para evitar el estreñimiento. En
• Calcio casos de insuficiencia renal crónica la dosis
• Solución salina hipertónica puede ser de cinco gramos cada ocho horas.
• Introducción del potasio a la célula
• Solución polarizante (dextrosa + insulina)
• Bicarbonato de sodio
• Bloqueadores beta adrenérgico LECTURAS RECOMENDADAS
• Remoción del potasio
• Diuréticos 1. Allon M. Hyperkalemia in end-stage renal disease:
• Resinas de intercambio catiónico Mechanisms and management. J Am Soc Nephrol
• Hemodiálisis 1995; 6:1134-1142.
• Diálisis peritoneal 2. Kamel K, Quaggin S, Scheich A. Disorders of
potassium homeostasis. Am J Kidney Dis 1994;
CUADRO No. 2. TRATAMIENTO DE LA HIPERKALEMIA 24;597-613.
3. Schaefer M, Link J, Hammenmann L. Excessive
hypokalemia and hyperkalemia following head
Calcio: suele usarse gluconato de calcio al injury. Intens Care Med 1995; 21;235-237.
10% en infusión en dos a tres minutos, con 4. Garcia NH, Baigorria ST, Juncos LI. Hyperkalemia,
renal failure, and converting-enzyme inhibition: an
especial precaución en pacientes que utilizan
overrated connection. Hypertension 2001 (3 Pt
digital. La dosis se puede repetir después de 2):639-44.
cinco minutos si no hay modificación en el tra- 5. Schepkens H, Vanholder R, Billiouw JM, Lameire
zado de ECG. N. Life-threatening hyperkalemia during combined
therapy with angiotensin-converting enzyme
Solución polarizante: hay distintas formas de inhibitors and spironolactone: an analysis of 25
preparación; la base es dextrosa hipertónica cases. Am J Med 2001; 110:438-41.
más 15 a 20 unidades de insulina. Logra la 6. Williams E, Fulop M. A puzzling case of hyperka-
laemia. Lancet. 2001; 357:1176- OJO: falta última
incorporación del potasio a la célula: al pasar
página
la glucosa a glucógeno, se logra disminuir el 7. McLean SA, Paul ID, Spector PS. Lidocaine-
K+ entre 0.5 y 1.5 mEq por hora. induced conduction disturbance in patients with
systemic hyperkalemia. Ann Emerg Med 2000;
Bicarbonato de sodio: es útil en los casos 36:615-8.
asociados con acidosis metabólica. Se calcu- 8. Charytan D, Goldfarb DS. Indications for hospita-
la la dosis de acuerdo a la depleción del bi- lization of patients with hyperkalemia. Arch Intern
carbonato. Med 2000; 160:1605-11.
9. Mandelberg A, Krupnik Z, Houri S, et al. Salbuta-
mol metered-dose inhaler with spacer for hyper-
Bloqueadores beta adrenérgicos: introducen kalemia: how fast? How safe? Chest 1999;
el potasio dentro de la célula por activación de 115:617-22.
la bomba Na-K ATPasa, ya sean administra-
dos por inhalación o por vía intravenosa.

684
CAPÍTULO XII: HIPOMAGNESEMIA

CAPÍTULO XII

Hipomagnesemia

John Duperly, MD, PhD


Depaertamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

Yury Forlan Bustos MD


Residente Medicina de Emergencias
Fundación Santa Fe de Bogotá
Universidad Del Rosario

Helvert Felipe Molina,


Interno Institucional de la Fundación Santa Fe de Bogotá
Universidad Nacional

INTRODUCCIÓN

E l magnesio (Mg) es el segundo catión


intracelular después del potasio y el cuar-
to más abundante en el organismo humano.
de colorimetría o espectrofotometria de absor-
ción atómica, pero es la fracción libre (aprox
55%) la que tiene acción fisiológica. Para la
Es un modulador esencial de la actividad eléc- detraminación de Mg++ libre se han desarro-
trica intracelular y transmembrana. El Mg es llado técnicas con electrodos específicos. Los
un cofactor de numerosas reacciones enzimá- niveles normales oscilan entre 1.5 y 1.9
ticas incluyendo todas aquellas donde intervie- meq/L (1.7 - 2.2 mg/dl; 0.75 - 0.95 mmol/L).
ne el trifosfato de adenosina (ATP). Se consi- La hiperbilirrubinemia, la hemólisis y los cam-
dera esencial en la producción de energía, sín- bios en el equilibrio acido -básico interfieren
tesis de DNA y proteínas, regulación de los con la determinaciones e interpretación de los
canales iónicos, receptores hormonales, trans- niveles séricos de Mg.
misión nerviosa, excitabilidad cardiaca y con-
tracción muscular. El balance corporal del Mg depende funda-
mentalmente de la absorción gastrointestinal
De los 2000 mEq que posee un adulto nor- y de la excreción renal. El equilibrio con los
mal, aproximadamente 50 a 60% se encuen- depósitos óseos toma por los general varias
tra en el sistema óseo, 38 a 39 % en el com- semanas. La ingestión diaria normal oscila
partimiento intracelular y solo 1 a 2 % se en- entre 300 y 350 mg y la absorción es inversa-
cuentra en el fluido intracelular. En la sangre mente proporcional a la cantidad ingerida, ya
se encuentra distribuido en tres formas: unido que obedece a un sistema de transporte satu-
a proteínas plasmáticas, a ligandos complejos rable y de difusión pasiva. La excreción renal
como bicarbonato y péptidos, o libre. Usual- diaria de magnesio es de aproximadamente
mente se determina como Mg total por medio 100 mg y su principal lugar de reabsorción (50-

685
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

60%) es la porción gruesa ascendente del asa es de 70 mg/dL. De forma similar, suele ob-
de Henle. Sin embargo es en el túbulo distal servarse hipomagnesemia en el hiperaldoste-
donde se realiza la principal regulación, dada ronismo. Así mismo, se incrementa la pérdida
principalmente por los niveles capilares de Mg de magnesio en la orina, cuando aumenta la
a nivel del asa de Henle, la hormona paratiroi- frecuencia y el volumen de la diuresis.
dea (PTH), la calcitonina, el glucagón, la hor-
mona antidiurética (ADH) y los cambios en el
pH y los niveles de potasio, calcio y NaCl. DIAGNÓSTICO
La Hipomagnesemia se encuentra con fre- Se recomienda medir los niveles séricos en
cuencia en pacientes hospitalizados (hasta presencia de situaciones descritas en la tabla
65% de los pacientes en Cuidado Intensivo, y 1, en especial ante la presencia de cuadros
12% en pabellones generales). Un estudio de cetoacidosis diabética pancreatitis aguda,
realizado por nuestro grupo en el año 2001 arritmias cardiacas, intoxicación digitálica,
en tres hospitales de Bogotá (FSFB, H Kenne- abuso de alcohol, malabsorción e insuficien-
dy, F Cardioinfantil) mostró un 9.3% de nive- cia renal. Es pertinente determinar simultánea-
les < 1.2, un 53% entre 1.2 y 1.6, tan solo mente creatinina y potasio séricos, así como
27.9% dentro de rangos normales (1.7-2.2) y glicemia y uroanálisis.
un 8.8% de valores > de 2.2 mg/dL, para un
total de 451 mediciones de Mg sérico en tres
meses consecutivos. Las determinaciones de CLÍNICA
Mg fueron mucho menos frecuentes (20-50%)
que las de Na, Cl y K, lo cual podría reflejar la Las manifestaciones clínicas de déficit mode-
falta de interés y/o conciencia sobre las posi- rados a severos son inespecíficas y se aso-
bles implicaciones de los trastornos del mag- cian con frecuencia a trastornos metabólicos
nesio en el estado de salud. La hipermagnese- adicionales como hipocalcemia, hipokalemia
mia es rara, como lo ratifica el anterior estu- y alcalosis metabólica:
dio y es por lo general iatrogénica tanto por
Mg IV como oral en forma de catárticos o Neuromusculares: debilidad muscular, vér-
antiácidos, en especial en pacientes con in- tigo y ataxia, parestesias, letargo, hiperrefle-
suficiencia renal. xia, ataxia, tetania-convulsiones, signos de
Chvostek y Trousseau.

ETIOLOGÍA Cardiovasculares: Arritmias ventriculares se-


veras, sensibilidad a glucósidos cardiacos,
Las causas mas frecuentes de hipomagnese- inversión de la onda T, ondas U, prolongación
mia son las pérdidas a nivel renal o gastroin- del intervalo QT, ensanchamiento del QRS y
testinal. (Tabla 1). Los cuadros clínicos que prolongación del intervalo PR.
se asocian habitualmente a hipocalemia tam-
bién producen a menudo hipomagnesemia. La Metabólicas: hiperinsulinismo, intolerancia a
restricción dietaria es la causa más común de los carbohidratos
hipomagnesemia por ejemplo en el alcoholis-
mo crónico. Otra causa importante es la dia- Los niveles inferiores a 1.5 meq/L (1.7 mg/dL;
rrea que produce grandes pérdidas: la con- 0.75 mmol/L) reflejan depleción de Mg. La
centración de magnesio en el líquido diarréico determinación de excreción de Mg en orina

686
CAPÍTULO XII: HIPOMAGNESEMIA

de 24h antes y después de una carga intrave- El monitoreo debe ser clínico y paraclínico y
nosa de Mg puede ser útil en el diagnóstico se sugiere considerar el balance de Mg admi-
diferencial y sobretodo en la detección de nistrado y eliminado (orina de 24h) para defi-
depleción de Mg con nivleles séricos norma- nir la conducta en casos difíciles. La adminis-
les. La administración de 7.5g de Sulfato de tración de Mg en pacientes con bloqueos AV
Mg en 24h y la cuantificación de la excreción o insuficiencia renal debe ser monitorizada
urinaria ha permitido detectar “retenedores” de cuidadosamente. Excepto en casos de emer-
> 70% de la carga de Mg administrada refle- gencia, se debe pasar una ampolla de sulfato
jando un déficit funcional de Mg aún en pre- de Mg en 30 a 60 min para disminuir el riesgo
sencia de niveles séricos normales de Mg to- de flebitis.
tal y ionizado.
Mg Parenteral y sus equivalencias:
1amp (10ml) de Sulfato de Mg al 20% = 2g de
TRATAMIENTO Sulfato de Mg
1gr de Sulfato de Mg = 98mg de Mg = 4mmol
La vía de administración del Mg depende de = 8meq
la severidad del déficit, en pacientes asintomá- 1gr de Cloruro de Mg = 118mg de Mg =
ticos se recomienda la suplencia via oral en 4.5mmol = 9 meq
forma de tabletas de cloruro gluconato o lacta-
to de Mg que aportan aproximadamente 3
TABLA 1. CAUSAS DE HIPOMAGNESEMIA.
mmol por tableta. La dosis recomendada os-
cila entre 2 y 6 tabletas según la severidad de Alcoholismo crónico
la depleción. La dieta rica en vegetales, car- Diuréticos
nes, nueces y granos, así como el control de Embarazo
los factores desencadenantes, siguen siendo Quemaduras
la recomendación general para los casos Pérdidas Renales
leves. Falla renal aguda y crónica
Diuresis postobstructiva
Pacientes sintomáticos, con niveles bajos de Necrosis tubular aguda
Glomerulonefritis Crónica
Mg o con mayor riesgo de complicaciones por
Pielonefritis Crónica
patología asociada requieren de una correc- Nefropatía intersticial
ción rápida por medio de la vía intravenosa. Transplante renal
Los bolos de Mg pueden provocar bradicardia,
Pérdidas gastrointestinales
bloqueos AV e hipotensión. En caso de arrit- Diarrea Crónica
mias severas, convulsiones, o tetania se pue- Succión nasogástrica
de iniciar con un bolo de 1-2 g de sulfato de Sindrome de intestino corto
Mg (4-8 mmol) en 5-10 minutos diluido en dex- Malnutrición proteico - calórica
trosa al 5% o solución salina normal. La dosis Fístulas intestinales
Nutrición parenteral total
diaria recomendada, en déficit moderados a Pancreatitis Aguda
severos es de 6g de sulfato de Mg al día
(aprox. 25 mmol), lo que corresponde a 3 am- Trastornos Endocrinos
Diabetes Mellitus
pollas de sulfato de Mg al 20%. Usualmente Hiperaldostronismo
es necesario mantener este aporte durante 3- Hipertiroidismo
5 días para corregir la depleción, en especial Hiperpartiroidismo
si se asocia a hipokalemia o hipocalcemia. Pofiria Intermitente Aguda

687
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Medicamentos blemente por el estudio MAGIC en curso des-


Diuréticos de el año 2000. Sigue siendo válido el con-
b-agonistas cepto de optimizar los niveles, no solo séricos
Teofilina sino tisulares e intracelulares, de Mg, K y oxi-
Aminoglucósidos geno como primera intervención antiarrítmica
Amphotericina en urgencias o cuidado crítico.
Cisplatino
Ciclosporina
Foscarnet
Pentamidina ASMA BRONQUIAL

Congénitos El Mg actua como relajante del músculo liso,


Hipomagnesemis familiar alterando la entrada de Calcio y la fosforilación
Diabetes materna intracelular. Puede atenuar además la res-
Hipotiroidismo materno puesta inflamatoria bronquial al inhibir la de-
Hiperparatiroidismo materno granulación de los mastocitos. Los estudios
realizados hasta el momento no son claramen-
te concluyentes, pero en general parece ha-
UTILIDAD CLÍNICA ber beneficio de administrar Mg como parte
DEL MAGNESIO PARA del manejo de la crisis asmática tanto en adul-
EL MANEJO DE URGENCIAS tos como en niños. Recientemente se ha plan-
teado la posiblidad de utilizar Mg isotónico
EVENTO CORONARIO AGUDO - IAM como vehículo para nebulización de agentes
b-2 en niños.
Aunque algunos estudios demuestran experi-
mentalmente el beneficio del magnesio en si-
tuaciones tales como el IAM, aún no existe ECLAMPSIA
evidencia clínica contundente. Lo efectos be-
néficos del Mg desde el punto de vista cardio- El sulfato de Mg fue sugerido como anticon-
vascular han sido demostrados en numerosos vulsivante en 1906 y ha sido ampliamente uti-
trabajos experimentales y algunos estudios lizado desde 1930. Su utilidad ha sido docu-
clínicos. Se destacan las propiedades de mentada en estudios aleatorizados y contro-
vasodilatación, el control de la presión arterial lados versus diazepam y fenitoina. Es consi-
y estabilizador de membrana, así como la mo- derada una medicación de primera línea en
dulación de la agregación plaquetaria y el con- eclampsia y se recomiendan dosis iniciales de
trol metabólico favorable de lípidos y carbohi- 4g de Sulfato de Mg seguido de infusión con-
dratos como los aspectos más interesantes. tinua de 1g por hora.
Las discrepancias en su aplicación clínica se
deben probablemente a la gran heterogenei-
dad de los cuadros clínicos manejados, así MIGRAÑA
como de las dosis y tiempos de aplicación con
relación a la instauración del evento coronario Su posible aplicación se basa en el impacto
agudo. Parece haber mayor beneficio en una del Mg ionizado sobre la actividad del recep-
aplicación temprana especialmente en pacien- tor de Serotonina así como en la inducción de
tes de alto riesgo. Estas y otras inquietudes vasoespasmo cerebral por elevación de la
específicas podrán ser aclaradas muy proba- relación Ca / Mg ionizados. Algunos estudios

688
CAPÍTULO XII: HIPOMAGNESEMIA

han demostrado utilidad tanto en profilaxis, of acute migraine attacks. Headache 2001; 41:171-
como en el manejo de diversos tipos de cefa- 177.
lea, detectando con frecuencia niveles bajos 2. Douban S, Brodsky MA, Whang DD, et al.
Significance of magnesium in congestive heart
de Mg sérico en estos pacientes. Su recomen-
failure. Am Heart J 1996; 132:664-667.
dación carece de estudios prospectivos gran- 3. Duley L, Henderson-Samrt DJ, Magnesium sulfate
des hasta el momento, pero el potencial be- versus diazepam and fenitoin for eclampsia. The
neficio, seguridad y bajo costo permiten su Cochrane Library, Issue 3, 2000.
consideración terapéutica en urgencias. 4. J Marx, R Hockberg, R Walls, et al. Rosen´s.
Emergency Medicine. Concepts and Clinical
Practice. Fifth Edition. CV Mosby, St. Louis, 2002.
ABSTINENCIA ALCOHÓLICA 5. Kaye P, O’ Sullivan I. The role of magnesium in
the emergency department. Emerg Med J 2002;
19:288-291.
La deficiencia de Mg es una hallazgo frecuente 6. Mayo-Smith F. Pharmacological management of
en alcoholismo crónico, debido a malnutrición, alcohol withdrawal: a meta-analisis and evidence
pérdidas gastrointestinales, déficit de fósforo based practice guideline. JAMA 1997; 278:144-151.
y de vitamina D. La corrección del déficit de 7. Nannini LJ, Pendino JC, Corna RA. Magnesium
Mg en presencia de factores de riesgo pñara sulfate as a vehicle for nebulised salbutamol in
hipomagnesemia es siempre recomendable acute asthma. Am J Med 2000; 108:193-197.
en el paciente de urgencias. Sin embargo no 8. Rowe BH, Bretzlaff JA, Bota GW. Magnesium
sulfate treatment for acute asthmatic exacerba-
existe hasta el momento evidencia clínica só- tions treated in the emergency department. The
lida acerca de la disminución en la severidad Cochrane Library, Issue 2, 1999.
o frecuencia de convulsiones o delirio en abs- 9. Smetana R. Cardiovascular Medicine - Acute
tinencia alcoholica, por medio de al adminis- Myocardial Infarction: The importance of
tración sulfato de Mg. magnesium as a pharmacological agent. Am Heart
J 1996; 136:463-494.
10. The Eclampsia Trial Collaborative Group. Which
anticonvulsivant for women with eclampsia?
LECTURAS RECOMENDADAS Evidence from the Collaborative Eclampsia Trial.
Lancet 1995; 345:1455-1463.
1. Altahona H, Barreto FJ. Trastornos del calcio, fós- 11. The Magic Steering Comité. Rationale and design
foro y magnesio. En: Compendio de Terapéutica. of the magnesium in coronaries (Magic) study. A
Segunda edición. Editado por Asociación Colom- clinical trial to reevaluate the efficacy of early
biana de Medicina Interna. Capítulo Central. Edi- administration of Mg in acute myocardial infarction.
ciones Acta Medica Colombiana. Bogotá, 1992 Am Heart J 2000; 139:10-14.
1. Demirkaya S, Vural O, Dora B. Efficacy of 12. Zaloga GP, Chernow BC. Endocrine crises. Critical
intravenous magnesium sulfate in the treatment Care Clin 1991; 7:215-245.

689
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIII

Hipermagnesemia
John Duperly, MD, PhD
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

Yury Forlan Bustos MD


Residente Medicina de Emergencias
Fundación Santa Fe de Bogotá
Universidad Del Rosario

Helvert Felipe Molina,


Interno Institucional de la Fundación Santa Fe de Bogotá
Universidad Nacional

INTRODUCCIÓN

E l magnesio (Mg) es el segundo catión


intracelular después del potasio y el cuar-
to más abundante en el organismo humano.
ca, pero es la fracción libre (aprox 55%) la que
tiene acción fisiológica. Para la detraminación
de Mg++ libre se han desarrollado técnicas con
Es un modulador esencial de la actividad eléc- electrodos específicos. Los niveles normales
trica intracelular y transmembrana. El Mg es oscilan entre 1.5 y 1.9 meq/L (1.7 - 2.2 mg/
un cofactor de numerosas reacciones enzimá- dl; 0.75 - 0.95 mmol/L). La hiperbilirrubinemia,
ticas incluyendo todas aquellas donde inter- la hemólisis y los cambios en el equilibrio aci-
viene el trifosfato de adenosina (ATP). Se con- do-básico interfieren con la determinaciones
sidera esencial en la producción de energía, e interpretación de los niveles séricos de Mg.
síntesis de DNA y proteínas, regulación de los
canales iónicos, receptores hormonales, trans- El balance corporal del Mg depende funda-
misión nerviosa, excitabilidad cardiaca y con- mentalmente de la absorción gastrointestinal
tracción muscular. y de la excreción renal. El equilibrio con los
depósitos óseos toma por los general varias
De los 2000 mEq que posee un adulto normal, semanas. La ingestión diaria normal oscila
aproximadamente 50 a 60% se encuentra en entre 300 y 350 mg y la absorción es inversa-
el sistema óseo, 38 a 39 % en el compartimien- mente proporcional a la cantidad ingerida, ya
to intracelular y solo 1 a 2 % se encuentra en que obedece a un sistema de transporte satu-
el fluido intracelular. En la sangre se encuentra rable y de difusión pasiva. La excreción renal
distribuido en tres formas: unido a proteínas diaria de magnesio es de aproximadamente
plasmáticas, a ligandos complejos como bicar- 100 mg y su principal lugar de reabsorción (50-
bonato y péptidos, o libre. Usualmente se de- 60%) es la porción gruesa ascendente del asa
termina como Mg total por medio de colorime- de Henle. Sin embargo es en el túbulo distal
tría o espectrofotometria de absorción atómi- donde se realiza la principal regulación, dada

690
CAPÍTULO XIII: HIPERMAGNESEMIA

principalmente por los niveles capilares de Mg DIAGNÓSTICO


a nivel del asa de Henle, la hormona parati-
roidea (PTH), la calcitonina, el glucagón, la Las manifestaciones clínicas se relacionan
hormona antidiurética (ADH) y los cambios en con los niveles séricos. Como se mencionó
el pH y los niveles de potasio, calcio y NaCl. previamente, la hemólisis, la hiperbilirrubine-
mia, y los cambios en el equilibrio ácido -bá-
La Hipomagnesemia se encuentra con frecuen- sico interfieren con la determinación e interpre-
cia en pacientes hospitalizados (hasta 65% de tación de los niveles séricos de Mg.
los pacientes en Cuidado Intensivo, y 12% en
pabellones generales). Un estudio realizado por La hipermagnesemia afecta fundamentalmen-
nuestro grupo en el año 2001 en tres hospitales te los sistemas nervioso y cardiovascular. Los
de Bogotá (FSFB, H Kennedy, F Cardioinfantil) síntomas tempranos incluyen náuseas y vómi-
mostró un 9.3% de niveles < 1.2, un 53% entre to, debilidad “flushing cutáneo” y aparecen usual-
1.2 y 1.6, tan solo 27.9% dentro de rangos nor- mente a partir de 3 mg/dL. Cuando los niveles
males (1.7-2.2) y un 8.8% de valores > de 2.2 sobrepasan los 4 mg/dL, se observa hiporreflexia
mg/dL, para un total de 451 mediciones de Mg generalizada e hipotensión. La monitoría del
sérico en tres meses consecutivos. Las deter- reflejo patelar constituye una herramienta sim-
minaciones de Mg fueron mucho menos fre- ple y rápida para la evaluación temprana de toxi-
cuentes (20-50%) que las de Na, Cl y K, lo cual cidad por Mg. Con niveles superiores 5 o 6 mg/
podría reflejar la falta de interés y/o conciencia dL aparecen cambios electrocardiográficos
sobre las posibles implicaciones de los trastor- como ensanchamiento del QRS, prolongación
nos del magnesio en el estado de salud. La de QT y trastornos de la conducción. Niveles
hipermagnesemia es rara, como lo ratifica el superiores a 9 mg/dL se han asociado a depre-
anterior estudio y es por lo general iatrogénica sión respiratoria, coma y bloqueos cardiacos
tanto por Mg IV como oral en forma de catár- completos, asistolia, y muerte.
ticos o antiácidos, en especial en pacientes con
insuficiencia renal.
TRATAMIENTO
ETIOLOGÍA El primer paso es suprimir cualquier funte exó-
gena de Mg. Los pacientes con insuficiencia
No es un trastorno frecuente y la elevaciones renal con hipermagnesemia deben ser someti-
leves en los niveles séricos tienen pocas impli- dos a diálisis, utilizando un dializado libre de
caciones clínicas. El adulto normal es capaz magnesio. Es indispensable el tratamiento con
de excretar hasta 6g al día de Mg, por lo tanto la supervisión del nefrólogo. Si el paciente no
su aparición es casi exclusiva de la insuficien- tiene insuficiencia renal o ésta es muy leve,
cia renal aguda o crónica que se puede asociar se siguen los siguientes pasos:
con consumo excesivo de Mg (antiácidos o
laxantes). Otras causas frecuentes están des- • Solución salina isotónica. La expansión del
critas en la Tabla 1. Otra causa importante es volumen circulatorio favorece la excreción
la iatrogénica por utilización exagerada de urinaria de magnesio.
compuestos que contienen Mg. Puede apare-
cer hipermagnesemia durante el tratamiento • Furosemida (0.5 a 1 mg/kg IV). Aumenta
de las pacientes toxémicas, pero no es fre- la excreción del magnesio en pacientes con
cuente en presencia de función renal normal. función renal adecuada.

691
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Inyección lenta de 5 mL de cloruro de cal- romusculares de una hipermagnesemia


cio al 10% o de 10 mL de gluconato de cal- potencialmente letal.
cio al 10% por vía intravenosa. Si los sín-
tomas no remiten se puede repetir a los 5- • Diálisis peritoneal. Está indicada en pacien-
10 minutos y posteriormente, según el es- tes con compromiso neurológico o cardio-
tado clínico del paciente. El objeto es anta- vascular severo o si los niveles de magne-
gonizar los efectos cardiovasculares y neu- sio superan los 8 mEq/L.

TABLA 2. CAUSAS DE HIPERMAGNESIEMIA

Alteración en la Excreción Renal de Magnesio

Administración Exógena Obstrucción Intestinal


Antiácidos Dilatación gástrica
Laxantes Colitis
Catárticos
Diálisis Miscellaneos
Parenteral Rabdomiolisis
Síndrome de lisis tumoral
Eliminación alterada Insuficiencia adrenal
Anticolinérgicos Hiperparatiroidismo
Narcóticos Hipotiroidismo
Estreñimiento crónico Terapia con Litio

UTILIDAD CLÍNICA DEL MAGNESIO


PARA EL MANEJO DE URGENCIAS
EVENTO CORONARIO AGUDO - IAM

Aunque algunos estudios demuestran experi- deben probablemente a la gran heterogenei-


mentalmente el beneficio del magnesio en si- dad de los cuadros clínicos manejados, así
tuaciones tales como el IAM, aún no existe como de las dosis y tiempos de aplicación con
evidencia clínica contundente. Lo efectos be- relación a la instauración del evento coronario
néficos del Mg desde el punto de vista cardio- agudo. Parece haber mayor beneficio en una
vascular han sido demostrados en numerosos aplicación temprana especialmente en pacien-
trabajos experimentales y algunos estudios tes de alto riesgo. Estas y otras inquietudes
clínicos. Se destacan las propiedades de va- específicas podrán ser aclaradas muy proba-
sodilatación, el control de la presión arterial y blemente por el estudio MAGIC en curso des-
estabilizador de membrana, así como la modu- de el año 2000. Sigue siendo válido el con-
lación de la agregación plaquetaria y el con- cepto de optimizar los niveles, no solo séricos
trol metabólico favorable de lípidos y carbohi- sino tisulares e intracelulares, de Mg, K y oxí-
dratos como los aspectos más interesantes. geno como primera intervención antiarrítmica
Las discrepancias en su aplicación clínica se en urgencias o cuidado crítico.

692
CAPÍTULO XIII: HIPERMAGNESEMIA

ASMA BRONQUIAL ABSTINENCIA ALCOHÓLICA

El Mg actua como relajante del músculo liso, La deficiencia de Mg es una hallazgo frecuente
alterando la entrada de Calcio y la fosforilación en alcoholismo crónico, debido a malnutrición,
intracelular. Puede atenuar además la res- pérdidas gastrointestinales, déficit de fósforo
puesta inflamatoria bronquial al inhibir la de- y de vitamina D. La corrección del déficit de
granulación de los mastocitos. Los estudios Mg en presencia de factores de riesgo pñara
realizados hasta el momento no son claramen- hipomagnesemia es siempre recomendable
te concluyentes, pero en general parece haber en el paciente de urgencias. Sin embargo no
beneficio de administrar Mg como parte del existe hasta el momento evidencia clínica só-
manejo de la crisis asmática tanto en adultos lida acerca de la disminución en la severidad
como en niños. Recientemente se ha plantea- o frecuencia de convulsiones o delirio en abs-
do la posiblidad de utilizar Mg isotónico como tinencia alcoholica, por medio de al adminis-
vehículo para nebulización de agentes b-2 en tración sulfato de Mg.
niños.

LECTURAS RECOMENDADAS
ECLAMPSIA
1. Altahona H, Barreto FJ. Trastornos del calcio, fós-
El sulfato de Mg fue sugerido como anticonvul- foro y magnesio. En: Compendio de Terapéutica.
sivante en 1906 y ha sido ampliamente utili- Segunda edición. Editado por Asociación Colom-
biana de Medicina Interna. Capítulo Central. Edi-
zado desde 1930. Su utilidad ha sido docu-
ciones Acta Medica Colombiana. Bogotá, 1992.
mentada en estudios aleatorizados y contro- 2. Demirkaya S, Vural O, Dora B. Efficacy of intrave-
lados versus diazepam y fenitoina. Es consi- nous magnesium sulfate in the treatment of acute
derada una medicación de primera línea en migraine attacks. Headache 2001; 41:171-177.
eclampsia y se recomiendan dosis iniciales de 3. Douban S, Brodsky MA, Whang DD, et al.
4g de Sulfato de Mg seguido de infusión con- Significance of magnesium in congestive heart
tinua de 1g por hora. failure. Am Heart J 1996; 132:664-667.
4. Duley L, Henderson-Samrt DJ, Magnesium sulfate
versus diazepam and fenitoin for eclampsia. The
Cochrane Library, Issue 3, 2000.
MIGRAÑA
5. J Marx, R Hockberg, R Walls, et al. Rosen´s.
Emergency Medicine. Concepts and Clinical
Su posible aplicación se basa en el impacto Practice. Fifth Edition. CV Mosby, St. Louis, 2002.
del Mg ionizado sobre la actividad del recep- 6. Kaye P, O’ Sullivan I. The role of magnesium in
tor de Serotonina así como en la inducción de the emergency department. Emerg Med J 2002;
vasoespasmo cerebral por elevación de la 19:288-291.
relación Ca / Mg ionizados. Algunos estudios 7. Mayo-Smith F. Pharmacological management of
han demostrado utilidad tanto en profilaxis, alcohol withdrawal: a meta-analisis and evidence
based practice guideline. JAMA 1997; 278:144-151.
como en el manejo de diversos tipos de cefa-
8. Nannini LJ, Pendino JC, Corna RA. Magnesium
lea, detectando con frecuencia niveles bajos sulfate as a vehicle for nebulised salbutamol in
de Mg sérico en estos pacientes. Su recomen- acute asthma. Am J Med 2000; 108:193-197.
dación carece de estudios prospectivos gran- 9. Rowe BH, Bretzlaff JA, Bota GW. Magnesium
des hasta el momento, pero el potencial be- sulfate treatment for acute asthmatic exacerba-
neficio, seguridad y bajo costo permiten su tions treated in the emergency department. The
consideración terapéutica en urgencias. Cochrane Library, Issue 2, 1999.

693
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

10. Smetana R. Cardiovascular Medicine - Acute 12. The Magic Steering Comité. Rationale and design
Myocardial Infarction: The importance of of the magnesium in coronaries (Magic) study. A
magnesium as a pharmacological agent. Am Heart clinical trial to reevaluate the efficacy of early
J 1996; 136:463-494. administration of Mg in acute myocardial infarction.
11. The Eclampsia Trial Collaborative Group. Which Am Heart J 2000; 139:10-14.
anticonvulsivant for women with eclampsia? 13. Zaloga GP, Chernow BC. Endocrine crises. Critical
Evidence from the Collaborative Eclampsia Trial. Care Clin 1991; 7:215-245.
Lancet 1995; 345:1455-1463.

694
CAPÍTULO XIV: TRASTORNOS DEL SODIO

CAPÍTULO XIV

Trastornos del sodio

María de los Ángeles Roversi, MD


Oficina de Recursos Educacionales,
Federación Panamericana de
Asociaciones de Facultades (Escuelas) de Medicina

Eugenio Matijasevic, MD
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l sodio, es el catión mas abundante del


organismo; 70% del sodio corporal total
existe en forma libre, de este porcentaje 97%
el resto se excreta por piel y sudor (5 mEq/día),
y con las heces (5mEq/día), para completar
el total de los 150mEq de la ingestión diaria.
se encuentra en el líquido extracelular (LEC)
y 3% en el líquido intracelular (LIC); el 30%
restante esta en forma fija, no intercambiable HIPONATREMIA
en el hueso, cartílago y tejido conectivo. El
sodio libre es responsable de más de 90% de Se define hiponatremia, la disminución del
la osmolaridad del LEC, y su concentración sodio sérico por debajo de 136 mEq/L. Es el
esta íntimamente relacionada con el balance trastorno hidroelectrolítico más frecuente en
hídrico. Por esta razón se le ha denominado la practica médica, siendo la hiponatremia dilu-
el acuacrito, por ser el electrolito que indica el cional la mas común de todas.
volumen de agua corporal. Generalmente se
presenta una relación inversa entre la concen- En USA, la incidencia de hiponatremia, es de
tración del sodio plasmático y el volumen de aproximadamente 1% en pacientes hospitali-
agua corporal: las hiponatremias son indicati- zados. Se describe igual tasa de presentación
vas de aumento de agua corporal (sobrehidve- en hombres que en mujeres y es más frecuen-
locidadción) y las hipernetremias de la dismi- te en edades extremas de la vida. Distinguir
nución de agua corporal (deshidvelocidad- entre hiponatremia aguda o crónica tiene vital
ción). Mientras que la hipernatremia, siempre importancia en términos de morbi-mortalidad,
se asocia a hipertonicidad, la hiponatremia, y para definir la conducta médica.
puede ser asociada con una tonicidad normal,
baja o alta. Existen tres mecanismos posibles para el ori-
gen de la hiponatremia:
Los riñones son los órganos reguladores del
metabolismo del sodio, exhibiendo una capa- 1. Ingestión deficiente de sodio,
cidad casi ilimitada para excretar sodio. Nor- 2. Excesiva perdida de sodio (renal o
malmente el adulto ingiere 150 mEq de sodio extrarenal)
con la dieta diaria y el riñón excreta 140mEq, 3. Retención excesiva de agua.

695
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La concentración sérica de sodio, es mante- manas) el tejido cerebral reduce el ingreso de


nida por mecanismos que involucran la sed, agua a la célula, modulando de esta manera
hormona antidiurética (ADH) y función renal. el edema cerebral.

La hiponatremia, rara vez es causada por baja Cuando los niveles de sodio caen rápidamente
ingestión de sodio, excepto en infantes que in- (24–48 horas), no se instala el mecanismo
gieren alimentos hipotónicos, sin embargo la compensatorio, originando edema cerebral,
causa mas común de hiponatremia en niños es con la consiguiente hipertensión endocrenea-
la pérdida de sodio por el tracto gastrointestinal. na, cuya principal complicación es la compre-
sión mecánica de las estructuras cerebrales
La pérdida de sodio puede ocurrir por vía re- y la herniación.
nal, debido a la administración de diuréticos o
por causas menos frecuentes como nefritis La hiponatremia, está asociada con medica-
perdedora de sal, deficiencia de mineralocor- mentos como amiodarona, carbamazepina,
ticoides, síndrome de cerebro perdedor de sal. ciclofosfamida, opiáceos, tiazidas, oxitocina,
demopremoresina, inhibidores de serotonina
El exceso de ADH, origina retención de agua y vincristina entre otros.
y por consiguiente hiponatremia dilucional. La
producción excesiva de esta hormona puede La hiponatremia se clasifica según la tonicidad
ocurrir en respuesta al dolor, emesis, o ante plasmática, entendiendo la tonicidad como la
el incremento de la osmolaridad plasmática osmolaridad efectiva, en:
o disminución del volumen intravascular ante
el síndrome de secreción inadecuada de ADH Isotónica o Pseudohiponatremia: la osmola-
(SIADH). ridad sérica es normal. El plasma contiene
93% de agua y 7% de sólidos como lípidos y
La aldosterona, sintetizada por la corteza adre- proteínas, por consiguiente cuando estos com-
nal, es regulada de manera primaria por el eje ponentes aumenta, se generan un cambio de
renina-angiotensina-aldosterona, pero también agua libre del LIC al LEC, sin modificarse el
en cierto grado por la concentración de sodio y contenido de agua total. Estos pacientes no
la hipovolemia. La aldosterona produce reten- deben recibir tvelocidadmiento hidroelectrolí-
ción de agua y sodio a nivel del túbulo distal. tico, sino tvelocidadmiento para su patología
de base como la hipertrigliceridemia, macro-
Es de hacer notar que el riñón sano, regula el globulinemia de Waldestrom, miloma múltiple.
balance de sodio, independientemente de la
ADH y la aldosterona, controlando la absor- Hiponatremia Hipertónica: La osmolalidad
ción de sodio en el túbulo distal. sérica está aumentada, debido a solutos como
agentes de contraste radioopacos, glicina,
La hiponatremia, es fisiológicamente signifi- manitol o la misma glucosa (el sodio sérico
cativa, cuando hay un estado de hipoosmo- disminuye 1,6 mEq/L por cada 1000 mg/dL
laridad y una tendencia de movimiento del que aumenta la glicemia), generando una fuer-
agua libre del LEC al LIC. za osmótica que atrae agua al compartimien-
to intravascular diluyendo el sodio. El tveloci-
La velocidad de aparición de la hiponatremia dadmiento de estos pacientes es la correc-
juega un papel importante en la fisiopatología; ción del estado hiperosmolar con hidveloci-
cuando el descenso es paulatino (días o se- dadción, sin administrar sodio.

696
CAPÍTULO XIV: TRASTORNOS DEL SODIO

TABLA 1. CAUSAS DE HIPONATREMIA.


Adrogué H, et al. Hyponatremia. N Eng J Med 2000; 342:1581-1589.

1. Alteración renal en la excreción de agua


Disminución del LEC
• Pérdida renal de sodio
Diuréticos
Diuresis osmótica (úrea, glucosa, manitol)
Insuficiencia adrenal
Nefropatía perdedora de sal
Cetonuria
• Pérdida extrarenal de sodio
Diarrea
Vómito
Perdida sanguínea
Sudoración excesiva
Tercer espacio (obstrucción intestinal, pancreatitis, quemaduras, trauma muscular, peritonitis)
Incremento del LEC
Insuficiencia cardiaca congestiva
Cirrosis
Síndrome nefrótico
Falla renal (aguda o crónica)
Embarazo
Euvolemia
Diuréticos tiazidicos
Hipotiroidismo
Insuficiencia adrenal
SIADH
Desórdenes del SNC (hemorragia, trauma, masa expansiva intracraneana, enfermedad desmielinizantes o
inflamatorias)
Drogas (desmopresina, oxitocina, nicotina, fenotiazidas, recaptadores de serotonina, derivados opiáceos,
carbamazepinas, ciclofosfamida, vincristina)
Condiciones pulmonares ( insuficiencia respiratoria aguda, infección, ventilación de presión positiva)
Varios (estados postoperatorios, dolor)
2. Ingestión excesiva de agua
Polidipsia primaria
Formulas infantiles diluidas

Hipotónica o Verdadera: la hiponatremia Hiponatremia euvolemica: El agua corporal


verdadera es la hipotónica, siendo la concen- total se incrementa, aunque no hay detección
tración de sodio realmente baja. Se debe va- clínica de la misma, mientras el sodio corpo-
lorar el estado de hidvelocidadción del pacien- ral total, permanece normal. Como en la poli-
te lo que origina la división del trastorno en dipsia psicógena, administración intravenosa
hiponatremia hipervolémica, isovolemica o de solución hipotónicas, o en SIADH.
hipovolémica.

697
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Hiponatremia hipovolemica: Dada por dis- Hiponatremia hipervolemica: El agua cor-


minución del volumen intravascular. El agua poral aumenta. Puede ocurrir en falla renal
corporal total y el sodio disminuyen. La perdi- aguda o crónica, SIADH, hipotiroidismo y de-
da de sodio puede ocurrir por vía renal (nefro- ficiencia de cortisol, síndrome nefrótico, ente-
patía perdedora se sal, diuréticos tiazidicos) ropatía perdedora de proteínas. El paciente
o no renal (TGI, sudoración excesiva, fístulas, presenta edema, ascitis, edema pulmonar.
tercer espacio, quemaduras). Estos pacientes tiene incapacidad para man-
tener un volumen circulante efectivo y por con-
siguiente la liberación de ADH, que aumenta
la absorción de agua libre.

Algoritmo 1. Evaluación de la Hiponatremia. Guzmán F, Carrizosa E, Jiménez C. Líquidos y electrolitos.


Primera edición. Biblioteca Jurídica Diké. Medellín, 1998.

698
CAPÍTULO XIV: TRASTORNOS DEL SODIO

CLÍNICA La FENa (Fracción excretada de sodio), se


define como el porcentaje de sodio filtrado que
La clínica suele ser no especifica, necesitán- se excreta por orina, y se calcula mediante la
dose un índice de sospecha por parte del mé- formula FENa= (Na urinario x Creatinia Plas-
dico. La sintomatología, se relacionan más con mática / Creatinina Urinaria x Na Plasmático)
la velocidad de descenso del electrolito, que x 100 = Su valor normal es de 0,7%.
con los niveles séricos de sodio. Sin embargo
cuando la concentración de sodio es menor En pacientes hipovolémicos la concentración
de 125 mEq/L, por lo general se hace sinto- urinaria de sodio es menor de 20 mEq/L y la
mática. En este sentido, la hiponatremia pue- FENa menor de 1%, con una osmolaridad uri-
de ser, asintomática o encontrarse síntomas, naria mayor de 600 mOsm/L y densidad ma-
como la anorexia, dolor de cabeza, calambres yor de 1.020.
musculares, dolor de cabeza, letárgia, mareos,
coma y en este caso podrían presentarse con- La fracción excretada de sodio puede verse
vulsiones e incluso, hipertensión endocranea- alterada, por la depleción de volumen por diu-
na que puede producir herniación, presentan- réticos, diuresis osmótica y enfermedad renal.
do en este caso, pupila dilatada unilateral, pos-
tura de decorticación o decerebración y difi-
cultad respiratoria. TRATAMIENTO
La determinación del estado de hidvelocidad- El manejo de la hiponatremia en urgencias,
ción del paciente puede contribuir a estable- debe enfocarse hacia la determinación de la
cer la etilogía: causa y de la cronicidad de la hiponatremia.
La hiponatremia aguda es menos común, que
• Mucosas secas, taquicardia, turgencia de la hiponatremia crónica y se presenta en pa-
la piel disminuida e hipotensión ortostatica, cientes con polidipsia psicógena, en pacien-
sugieren excesiva perdida de agua y repo- tes a los que se administran soluciones hipotó-
sición inadecuada. nicas, en estados postoperatorios o niños que
• Edema periférico, ascitis, ritmo galope por ingieren alimentos hipoosmolares.
S3, sugieren hiponatremia hipervolemica
con excesiva retención de agua libre (sín- En pacientes con hiponatremia asintomática
drome nefrótico, cirrosis o falla cardiaca). y orina diluida (<200mOsm/Kg H2O), la sola
• Paciente sin ninguno de los síntomas ante- restricción de agua libre podría ser suficiente
riores, presentan hiponatremia euvolemica, para corregir el trastorno.
generalmente asociada con ingestión ex-
cesiva de agua, hipotiroidismo, deficiencia No existe consenso en el tratamiento de la
de cortisol, SIADH. hiponatremia sintomática. En pacientes con
función renal normal o síntomas leves, elimi-
La medición de la concentración de sodio uri- nar la fuente primaria de agua libre, puede ser
nario y el cálculo de su fracción excretada pro- suficiente. Los que presentan sintomatología
vee una herramienta útil para el análisis de severa, deben recibir soluciones hipertónicas.
los pacientes con alteración de la homeostasis Aunque la corrección debe ser lo suficiente-
hidrosalina. mente rápida para aliviar los síntomas produ-
cidos por hipotonicidad, no debe ser tan agre-
siva como para originar desmielinización

699
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

osmótica (mielinolisis). Consideraciones fisio- 1-2 mEq/L/hora, recomendándose detener la


lógicas muestran que un incremento del sodio corrección rápida al cesar los síntomas que
sérico del 5%, debería reducir el edema cere- amenazan la vida del paciente, o al alcanzar
bral. Aunque las convulsiones inducidas por una concentración sérica de 125-130 mEq/L
hiponatremia pueden detenerse con el incre- (o aún menor si el valor de sodio en plasma
mento sérico del sodio, deben utilizarse dro- es inferior a 100 mEq/L).
gas anticonvulsivantes y asegurar una ade-
cuada ventilación. La mayoría de los reportes La velocidad de corrección de la hiponatremia
de desmielinización ocurren cuando la veloci- debe ser calculada utilizando la siguiente fór-
dad de corrección excede de 12 mEq/L/día, mula:
sin embargo han sido reportado casos con
correciones de 9–10 mEq/L en 24 horas o 19 Cambio en la concentración de Na sérico=
mEq/L en 48 horas. Adrogué H et al, recomien- Concentración de Na en 1 litro de infusión –
dan elevar los niveles séricos de sodio, a ra- Na sérico/ Agua corporal total +1= Efecto es-
zón de 8 mEq/L/día. En pacientes con sínto- timado de 1 litro de solución sobre el sodio
mas severos la corrección puede iniciarse a sérico.

TABLA 2. CONCENTRACIÓN DE NA EN SOLUCIONES

Solución Concentración de Na mEq/L


Solución salina 3% 513
Solución salina 0,9% 154
Lactato de Ringer 130
Dextrosa 5% 0

Pacientes con hiponatremia sintomática, con HIPERNATREMIA


osmolaridad urinaria > o = 200mOsm/Kg de
H2O y clínica de euvolemia o hipervolemia Se define como la concentración de sodio que
requieren solución salina hipertónica. La ad- excede los 145 mEq/L. La hipernatremia, re-
ministración de esta solución es usualmente presenta un déficit de agua en relación a las
combinada con furosemida, para inducir diu- concentraciones corporales de sodio y puede
resis. Adicionalmente la terapia de reempla- originarse por la pérdida de agua o por la ga-
zo hormonal debe iniciarse en pacientes con nancia de sodio.
hipotiroidismo, insuficiencia adrenal una vez
realizado el diagnostico confirmatorio de es- La incidencia internacional de hipernatremia,
tas patologías. Por otro lado, la mayoría de varía del 1,5 al 20%. Sin predilección por raza
los pacientes con hipovolemia, pueden ser o genero. Siendo la mortalidad atribuida a este
tvelocidaddos con solución salina isotónica en trastorno de aproximadamente 10%. Los pa-
principio para corregir el déficit de volumen. cientes con riesgo de presentar hipernatremia,

700
CAPÍTULO XIV: TRASTORNOS DEL SODIO

son aquellos con alteraciones mentales, eda- La siguiente tabla, presenta las causas de
des extremas y pacientes hospitalizados de- hipenatremia.
bido a iatrogenia.

La hipernatremia se presenta en:


1. Depleción de agua.
2. Exceso de sodio.

TABLA 3. CAUSAS DE HIPERNATREMIA


Adrogué H, et al. Hyponatremia. N Eng J Med 2000; 342:1581-1589.

1. Pérdida de agua
Perdidas insensibles
Hipodipsia
Diabetes insípida
Post-traumatica
Tumores, histiocitosis, tuberculosis, sarcoidosis
Idiopáticas
Causas renales
Diuréticos de asa
Diuresis osmótica (glucosa, urea, manitol)
Fase poliúrica de la necrosis tubular aguda
Pérdidas gastrointestinales
Vómito
Drenajes gástricos
Fístulas enterocutáneas
Diarrea
Agentes catárticos (lactulosa)
Perdidas cutáneas
Quemaduras
Sudoración excesiva

2. Ganancia de sodio
Infusión de bicarbonato de sodio
Ingestión de alimentos hipertónicos
Ingestión de agua de mar
Enemas hipertonicos
Hiperaldosteronismo primario
Síndrome de Cushing
Diálisis con soluciones hipertonicas

701
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La hipernatremia, también se puede clasifi- to de sodio ocurre de manera rápida (horas).


car según la volemia, en: En infantes los síntomas incluyen taquipnea,
debilidad muscular, fatiga, insomnio, letargia
• Hipernatremia hipovolemica: relaciona- y coma, las convulsiones son raras y por lo
da con síndrome diarreico, uropatía obs- general se asocian a una agresiva rehidveloci-
tructiva y diuresis osmótica. dadción. En adultos por el contrario los sínto-
• Hipernatremia euvolemica: se presenta mas son raros a menos que los niveles de
en patologías que desencadenan diabetes sodio se incrementen por encima de 160 mEq/
insípida. L, la sed intensa puede estar presente solo
en estados iniciales, el nivel de conciencia se
El incremento de sodio, aumenta la tonicidad relaciona con los niveles de sodio, encontrán-
del plasma promoviendo la salida de agua de dose también irritabilidad y debilidad muscular.
la célula al LEC, con el fin de mantener la
osmolaridad entre los compartimientos, con
la consiguiente deshidvelocidadción celular. TRATAMIENTO
El SNC, se adapta bien a la hipernatremia si El apropiado tratamiento de la hipernatremia,
la misma ocurre de manera crónica. Luego del requiere determinar la causa para establecer
segundo día de hipernatremia, sustancias la adecuada corrección del trastorno. En
osmóticas (moléculas idiogénicas) aparecen hipernatremia aguda, la rápida corrección,
en las neuronas; hay controversia en cuanto mejora el pronóstico sin incrementar el riesgo
al origen de estas, se ha postulado que éstas de edema cerebral, recomendándose la dis-
se mueven hacia la célula, y otra hipótesis se- minución de 1 mEq/L/hora. En pacientes con
ñala, que son producidas por la propia célula. hipernatremia crónica, se recomienda una dis-
La función de estas sustancias osmóticas, es minución del sodio sérico a razón de 0,5 mEq/
prevenir la deshidvelocidadción neuronal, sin L/hora, para prevenir el edema cerebral o las
embargo estas moléculas pueden originar pro- convulsiones. La meta del tvelocidadmiento
blemas durante la rehidvelocidadción, pues debe ser disminuir el sodio sérico a 145 mEq/
cuando se realiza de manera rápida la rehidve- L. Adrógue et al, recomiendan no disminuir la
locidadción, puede causar edema cerebral. concentración de sodio más de 10 mEq/L día
Los problemas a nivel del sistema nervioso en hipernatremia aguda o crónica.
central, ocurren con la contracción del espa-
cio celular que origina trombosis de peque- La vía preferida para administrar fluidos es la
ñas arterias y venas con ruptura de los mis- oral, sin embargo si la misma no esta disponi-
mos y por consiguiente sangrado intracere- ble debe ser utilizada la vía intravenosa, ad-
bral, hemorragia subaracnoidea, que pueden ministrando soluciones hipotónicas, como dex-
desencadenar daño permanente o incluso la trosa al 5% o solución salina 0,45%. La solu-
muerte. ción salina 0,9% debe utilizarse solo en ca-
sos de severo compromiso circulatorio.

CLÍNICA Se asume que el agua corporal total normal


(ACTn), corresponde al 60% del peso corpo-
Los signos y síntomas asociados con hiperna- ral en el hombre y al 50% en la mujer, por lo
tremia, son en esencia reflejo de la alteración que multiplicando el peso ideal por el factor
neuronal, principalmente cuando el incremen- 0,6 ó 0,5 respectivamente, se obtendrá este

702
CAPÍTULO XIV: TRASTORNOS DEL SODIO

valor. El cálculo de agua corporal actual se El requerimiento del volumen de infusión, y la


realiza mediante la siguiente fórmula: velocidad de infusión se calculan dividiendo
el cambio en el sodio sérico.
ACTactual = ACTn . (Na ideal / Na actual) = X
Litros.
LECTURAS RECOMENDADAS
El déficit de agua, se calcula mediante la si-
guiente fórmula: 1. Adrógue H, Madias N. Hypernatremia. N Eng J
Med 2000; 342(20):1493-1499.
ACT déficit = ACTn – ACTa = X Litros 2. Adrógue H, Madias N. Hyponatremia. N Eng J Med
2000; 342(21):1581-1589.
3. Guzmán F, Carrizosa E, Jiménez C. Líquidos y
Luego se seleccionar la infusión a utilizar, la electrolitos. Primera edición. Biblioteca Jurídica
velocidad de infusión debe calcularse según Diké. Medellín, 1998.
la formula 1 que estima los cambios en el sodio 4. Patiño JF. Líquidos y electrolitos en cirugía. En:
sérico dados por la administración de un litro Lecciones de cirugía. Por JF Patiño. Editorial
de solución. panamericana. Buenos Aires-Bogotá, 2000.

703
CAPÍTULO I: CUERPOS EXTRAÑOS EN EL TRACTO GASTROINTESTINAL EN NIÑOS

CAPÍTULO I

Cuerpos extraños en el tracto gastrointestinal


en niños

Mizrahin Méndez Manchola, MD


Jefe Sección de Cirugía Pediátrica
Hospital de la Misericordia

INTRODUCCIÓN

L os cuerpos extraños (CE) que llegan a la


boca de los niños pueden seguir dos ca-
minos: las vías respiratorias y el tracto gastro-
todo el TGI sin dificultad y son expulsados por
el recto. Algunos cuerpos extraños largos, del-
gados, puntiagudos metálicos no pueden pa-
intestinal (TGI). Causan síntomas por obstruc- sar de la segunda porción del duodeno o por
ción, compresión, laceración o perforación. el ángulo de Treitz, quedando enclavados en
ese sitio y a veces produciendo perforación y
La ingestión de cuerpos extraños puede pro- paso a otros órganos como el riñón derecho
ducir síntomas indeseables cuando se detie- en el caso de la ruptura del duodeno.
nen en el esófago, como babeo, tos, asfixia e
imposibilidad para pasar líquidos y sólidos. Otros sitios donde se pueden detener los C.E.
sin que exista lesión de tubo digestivo es a
Las monedas son los cuerpos extraños más nivel de la válvula Ileocecal y el apéndice. Tam-
comunes en el TGI en nuestro medio y también bién hemos encontrado CE en el divertículo
en el mundo. Los huesos están en el segundo de Meckel.
lugar en Colombia, porque aquí existe una
errada creencia de que los huesos picados de La perforación intestinal es siempre una gran
res (ganado vacuno) en la sopa produce subs- preocupación cuando se trata de cuerpos ex-
tancias alimenticias de gran importancia. traños cortantes o puntiagudos como agujas,
alfileres, ganchos de ropa (ganchos de nodri-
El esófago en su tercio superior justo a nivel zas) abiertos, puntillas etc., hasta unas peque-
del cartílago cricofaringeo es el sitio donde se ñas tijeras metálicas. Pero todos estos objetos
ubica el mayor número de CE del TGI. Hay son expulsados, casi en un 100%, espontá-
un pequeño número que se detiene en la unión neamente con la materia fecal, y sólo hay que
esofagástrica sin que exista lesión en el sitio. observar diariamente las deposiciones y ob-
servar si hay signos de alarma como fiebre o
Si un cuerpo extraño se detiene en el esófago dolor abdominal. Si aparece alguno de estos
por debajo del cricofaringeo es obligatorio des- signos, es necesario consultar de inmediato.
cartar patología de esófago: se ha observado
que los CE que pasan del cricofaringeo y lle- Los CE en el esófago pueden pasar inadver-
gan al estómago generalmente transitan por tidos. Es posible que los síntomas aparezcan

707
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

semanas, meses y hasta años después, con CUERPOS EXTRAÑOS


manifestaciones como fiebre, disfagia y des- EN LA FARINGE
nutrición grave. Cuando perforan el esófago
causan mediastinitis, empiema, pericarditis y Los cuerpos extraños que quedan en la farin-
un cuadro clínico muy severo. ge son, entre nosotros, principalmente espinas
de pescado, huesos, algunos objetos metáli-
Una forma muy dramática de presentación de cos y plásticos.
los CE que pasan inadvertidos son las hemo-
rragias cataclísmicas y mortales por perfora- Todos estos CE son extraídos con el paciente
ción de la aorta o de los vasos del cuello. bajo anestesia general, mediante el laringos-
copio de hoja recta y pinzas adecuadas, pro-
Otra forma de presentación de los CE que pa- cedimiento rápido, fácil y seguro. Una reco-
san desapercibidos en el esófago, son los sín- mendación especial es que una vez que el
tomas respiratorios como neumopatías cróni- paciente esté en un plano anestésico adecua-
cas, abscesos pulmonares y bronquiectasias do se debe revisar la faringe con la ayuda del
por broncoaspiración alimentaria crónica. laringoscopio antes de la intubación endotra-
queal, pues durante esta maniobra el CE se
Cuando se hace un esofagograma y se en- puede desalojar, impactar, producir sangrado
cuentran las imágenes más bizarras en este o quedar oculto detrás del tubo, todo lo cual
estudio en los niños, solo comparables con hace difícil su extracción. Si no se encuentra
cáncer de esófago avanzado en los adultos, el CE en la faringe, el paciente se debe intubar
es conveniente pensar de inmediato en cuer- y proceder con una esofagoscopia completa.
pos extraños enclavados en el esófago por
mucho tiempo. Otra precaución cuando no se encuentra en
la faringe es pasar una sonda de Nelaton por
las fosas nasales hasta la faringe, pues en
IMÁGENES DIAGNÓSTICAS DE CE ocasiones quedan ocultos detrás del velo del
EN TGI paladar en la rinofaringe. Si hay perforación
y/o absceso retrofaríngeo es necesario el dre-
Los CE radiopacos o de densidad metálica naje quirúrgico por vía cervical.
siempre están presente en las radiografías
simples de cuello, tórax o abdomen y usual-
mente no es necesario ningún estudio adicio- MANEJO DEL CUERPO EXTRAÑO
nal. Se debe tener muy presente que una ra- EN EL ESÓFAGO
diografía normal, no excluye la presencia de
un cuerpo extraño en vías aéreas o digestivas. El médico que se enfrenta a la extracción de
un cuerpo extraño debe manejar tanto los apa-
Si existe una sospecha razonable de CE y no ratos rígidos de endoscopia como los flexibles
se observa objeto alguno en la radiografía sim- y debe disponer de una alta provisión de pin-
ple, es necesario hacer un estudio con medio zas para el adecuado manejo de las diferen-
de contraste y/o practicar una endoscopia. La tes clases de CE.
TAC rara vez es útil para observar un CE en
las vías digestivas. La endoscopia digestiva con aparatos rígidos
o flexibles para extracción de CE debe ser
inocua en manos de personal calificado para

708
CAPÍTULO I: CUERPOS EXTRAÑOS EN EL TRACTO GASTROINTESTINAL EN NIÑOS

estos procedimientos y es el único examen ciegas” por la posibilidad de perforación eso-


para el diagnóstico certero de CE y sus com- fágica y aún de la vía aérea.
plicaciones; no tiene contraindicaciones for-
males. La radiografía simple lateral de cuello con hi-
perextensión y los hombros abajo, es de gran
La endoscopia pediátrica se practica la gran utilidad para evaluar el espacio retrofaríngeo
mayoría de las veces con anestesia general y poner en evidencia perforación de esófago
o sedación profunda, las razones son las si- superior o de faringe.
guientes:
Si se encuentra aire, nivel hidroaéreo o au-
mento del espacio prevertebral cervical, se
1. Disminuye el trauma psicológico del niño.
practica endoscopia para retirar el cuerpo ex-
2. Se tiene el control de la vía aérea.
traño y luego cervicotomía para drenar el abs-
3. Disminuye el riesgo de lesiones iatrogé-
ceso. Las laceraciones del esófago en estas
nicas.
condiciones no se suturan ni se buscan: éstas
4. Aumenta la tranquilidad y la seguridad del
cierran por segunda intención una vez retirado
endoscopista.
el dren que se deja por una a dos semanas.
Las monedas constituyen el mayor número de Si por alguna razón durante el procedimiento
cuerpos extraños atrapados en el esófago. para retirar el CE se perfora el esófago cervi-
Casi todos quedan en el tercio superior. Se cal o torácico, es necesario proceder con cervi-
retiran con sedación o con anestesia general cotomía o toracotomía inmediata y sutura de
y ayuno mandatorio de acuerdo con la edad. la perforación en dos planos.
Usamos los laringoscopios convencionales de
hoja recta de manera que se pueda montar la
base de la lengua y visualizar el estrecho su- CUERPOS EXTRAÑOS
perior del esófago y la moneda.
GASTRO-INTESTINALES
Las monedas que han estado alojadas por Los cuerpos extraños que alcanzan el estó-
más de 48-72 horas en el esófago presentan mago deben pasar a través del TGI sin dificul-
en ocasiones serios problemas para su ex- tad. Hay excepciones a esta regla, como son
tracción. Suelen estar enclavadas en las pa- los CE largos, rígidos y puntiagudos. Estos
redes del esófago y es necesaria la ayuda del CE deben ser retirados del estómago siempre
endoscopio rígido. que sea posible y se cuente con los endosco-
pios y pinzas adecuadas; lo mismo es aplica-
La extracción de las monedas y otros objetos ble a los cuerpos extraños considerados tóxi-
“romos” radiopacos del tercio superior del esó- cos como las “baterías de disco” en el estó-
fago con sondas de Foley, procedimiento que mago. En la radiografía siempre se ven como
se hace en sitios donde no se dispone de en- una moneda, pero si se observan con cuida-
doscopia, debe ser bajo control fluoroscópico, do se ve que en sus bordes hay “doble contor-
usando sondas de tamaño adecuado para la no”. Estas baterías tienden a perforar el sitio
edad, llenando el balón de la sonda con me- donde se detienen por liberación de su carga
dio de contraste no iónico por debajo del CE y eléctrica y su contenido alcalino.
retirando la sonda suavemente para recupe-
rar la moneda en la boca del paciente. Está Especial mención merecen los bezoares en
contraindicado hacer este procedimiento “a el TGI. En los niños se observan principalmen-

709
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

te dos tipos: los tricobezoares y los fitobe- característico. Siempre se requiere anestesia
zoares. En la experiencia del Hospital de la general para su extracción. Son muy olorosos.
Misericordia de Bogotá se cuenta con cator-
ce casos de tricobezoares “gigantes” que ocu-
paban todo el estómago, algunos con prolon- LECTURAS RECOMENDADAS
gación al duodeno y al intestino delgado (Sín-
drome de Rapunzel, trabajo no publicado). En 1. Dikensoy O, Usalan C, Filiz A. Foreign body
todos los pacientes se encontró úlcera gástrica aspiration: clinical utility of flexible bronchoscopy.
Postgrad Med J 2002; 78:399-403.
y algunos consultaron por sangrado digestivo.
2. Chen MK, Beierle EA. Gastrointestinal foreign
bodies. Pediatrics 2001; 30:736-742.
Los fitobezoares que se encuentran con ma- 3. Kalan A, Tariq M. Foreign bodies in the nasal
yor frecuencia son impactaciones de las semi- cavities: a comprehensive review of the aetiology,
llas de papayuela a nivel recto-anal con su olor diagnostic pointers, and therapeutic measures.
Postgrad Med J 2000; 76:484-487.

710
CAPÍTULO II: ENFERMEDAD ÁCIDO PÉPTICA

CAPÍTULO II

Enfermedad ácido péptica

Fernando Arias Amézquita, MD


Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a enfermedad úlceropéptica sintomática o


complicada es causa frecuente de consulta
a los servicios de urgencias. El dolor, la hemo-
El Helicobacter pylori tiene trofismo por la mu-
cosa gástrica y puede sobrevivir y crecer en
el ambiente hostil del estómago. Produce
rragia, la obstrucción o la perforación son for- ureasa que cataliza la hidrólisis de urea a dió-
mas frecuentes de consulta. El dolor de la úl- xido de carbono y amoníaco, creando un am-
cera presenta problemas significativos de biente alcalino que bloquea el medio ácido de
diagnóstico diferencial, y en el caso de la he- la mucosa gástrica. También utiliza el nitrato
morragia, la obstrucción y la perforación el pa- de amonio producido por la úrea para su pro-
ciente se encuentra en estado grave y en oca- pio crecimiento. La bacteria es móvil y puede
siones crítico. desplazarse rápidamente de los sitios agresi-
vos hacia los más favorables.

DEFINICIÓN
ÚLCERA Y ANTIINFLAMATORIOS
La enfermedad ácido péptica resulta del des- NO ESTEROIDEOS
equilibrio entre los agentes agresores (altas
concentraciones de ácido y pepsina en el La segunda causa más importante de úlcera
lúmen) y los mecanismos protectores (moco, péptica es el grupo de los antiinflamatorios no
bicarbonato, prostaglandinas) de la mucosa esteroideos (AINES). El riesgo de complicacio-
gastroduodenal. La infección por Helicobacter nes serias varía entre 1% y 4% por año en
pylori y los antinflamatorios no esteroideos son usuarios de AINES y la incidencia global de
las dos causas principales de las úlceras. úlceras por antinflamatorios está en incremen-
to por razón del mayor uso de estos fármacos
en la población de edad avanzada. El meca-
ÚLCERA Y nismo fundamental de la toxicidad gastrointes-
HELICOBACTER PYLORI tinal es la supresión de prostaglandinas gástri-
cas que tiene como consecuencia disminución
La infección por Helicobacter pylori causa in- del moco epitelial, secreción de bicarbonato,
flamación de la mucosa. Las diferentes cepas perfusión de la mucosa y proliferación epitelial
difieren en su capacidad de provocar inflama- -todos factores negativos-, y finalmente dismi-
ción. Aquellas que estimulan una reacción se- nución de la resistencia de la mucosa a la agre-
vera tienen mayor probabilidad de causar en- sión. La infección por Helicobacter pylori pue-
fermedad sintomática. de aumentar la gastrotoxicidad por AINES.

711
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PRESENTACIÓN CLÍNICA DE LA pico. Si el dolor persiste o no hay mejoría, se


ÚLCERA PÉPTICA debe tomar una radiografia de torax vertical
para descartar perforación. La esogagogastro-
La mayoría de los pacientes presenta sínto- duodenoscopia debe ser considerada.
mas dispépticos o relacionados con una com-
plicación como sangrado gastrointestinal, obs-
trucción o perforación. Los síntomas clásicos DIAGNÓSTICO
de úlcera péptica son el dolor epigástrico, que DE LA ÚLCERA PÉPTICA
ocurre una a tres horas después de las comi-
das y que mejora con la ingesta o con antiáci- La mayoría de las úlceras son identificadas
dos. Típicamente el dolor ocurre en episodios mediante endoscopia gastrointestinal superior.
que duran semanas o meses, seguido por re- Los estudios con medio de contraste (vías di-
misiones espontáneas variables. El dolor pue- gestivas altas) se realizan hoy apenas en for-
de despertar al paciente durante la noche. ma muy ocasional y bajo indicaciones preci-
Diez por ciento de los pacientes, particular- sas y muy limitadas; en realidad están contra-
mente aquellos con úlceras asociadas a indicados en el paciente agudo. La endoscopia
AINES, acuden a la consulta de urgencias con se recomienda en la evaluación inicial y sirve
complicaciones y sin dolor previo. No hay sig- para descartar cáncer gástrico o complicacio-
nos físicos específicos de la úlcera péptica, nes de la úlcera. Si las pruebas iniciales para
pero se puede encontrar dolor a la palpación Helicobacter pylori son positivas, se puede
del epigastrio o del hipocondrio derecho. iniciar tratamiento de entrada.

Eventualmente se encuentra sangre en el tac- La úlcera se puede clasificar y categorizar por


to rectal u oculta en las heces. Los exámenes su localización, por la etiología o por ambas.
de laboratorio usualmente aparecen dentro de La endoscopia tiene especial indicación para
límites normales, pero en casos de sangrado evaluar las úlceras gástricas debido a que
agudo se ve disminución de la hemoglobina y entre 1% y 5% de las úlceras crónicas son
del hematocrito, o en los pacientes con san- malignas. La gastroscopia permite tomar biop-
grados crónicos una anemia ferropénica. sias para examen histológico. La ultrasono-
grafía endoscópica es un método muy útil que
El paciente que acude al servicio de urgen- permite determinar la profundidad y la fibrosis
cias con dolor epigástrico debe ser evaluado de la úlcera.
en forma meticulosa. Si tiene más de 45 años
se debe descartar un evento coronario agu-
do. Se toman muestras para amilasa y hemo- DIAGNÓSTICO DE INFECCIÓN POR
grama y se ordena una ecografía abdominal HELICOBACTER PYLORI
para descartar colelitiasis y cólico biliar en el
diagnóstico diferencial. El examen físico debe El diagnóstico se hace en forma electiva (sero-
incluir el tacto rectal para descartar sangrado. logía, prueba de urea exhalada, antígenos de
Paralelamente, se inicia tratamiento con anti- H. pylori en heces y medición de gastrina
H2 ó u inhibidor de bomba de protones, como sérica para descartar síndrome de Zollinger-
el omeprazol. Si el dolor mejora y los exame- Ellison), y más allá de la endoscopia con toma
nes son normales, se puede dar de alta y en- de muestras para H. pylori no se realiza en el
viar a consulta externa para estudio endoscó- contexto del servicio de urgencias.

712
CAPÍTULO II: ENFERMEDAD ÁCIDO PÉPTICA

TERAPIA DE LA ENFERMEDAD cias de la intervención quirúrgica demoran una


ULCEROSA operación apropiada y con ello pueden con-
vertir una situación electiva o semi electiva en
La terapia tiene dos objetivos: la cicatrización una emergencia, con el correspondiente incre-
y la erradicación de la causa y se basa en la mento de la morbilidad y mortalidad periope-
etiología de la úlcera. ratorias.

En nuestra institución el tratamiento para la Las indicaciones modernas para la cirugía


infección por H. pylori es de 15 días: electiva incluyen:

• claritromicina 500 mg dos veces al día; • Sospecha de malignidad.


• metronidazol 500 mg dos veces al día; • Intolerancia o falta de obediencia al trata-
• omeprazol 40 mg al día. miento médico.
• Alto riesgo de complicaciones de la úlcera,
como pacientes con trasplantes, con tera-
INDICACIONES DE CIRUGÍA pia de esteroides o de AINES.
EN ENFERMEDAD ULCEROSA • Úlceras gástricas o duodenales gigantes.
• Síntomas severos, falla en la cicatrización
El manejo de la enfermedad acidopéptica ha bajo tratamiento médico o recurrencia de
cambiado dramáticamente en las últimas dé- los síntomas luego de múltiples ciclos de
cadas. Con el advenimiento de agentes antise- terapia médica.
cretorios potentes (bloqueadores de H2 e inhi- • Preferencia del paciente.
bidores de la bomba de protones) y el recono- • Falla en el manejo no quirúrgico de una
cimiento del papel patogénico de la infección complicación de la úlcera.
por Helicobacter pylori, la terapia médica ha
reemplazado a la cirugía como el manejo de
elección de esta enfermedad. Sin embargo, COMPLICACIONES DE LA ÚLCERA
la cirugía permanece como el principal trata- PÉPTICA
miento de las complicaciones, de la emergen-
cia y de la enfermedad avanzada. Las complicaciones de le enfermedad ulcero-
péptica constituyen una causa importante y
La terapéutica quirúrgica para la enfermedad grave de consulta a los servicios de urgen-
ulcerosa, que hoy en forma creciente se hace cias. Aproximadamente el 25% de los pacien-
por métodos laparoscópicos, está indicada en tes con úlcera péptica experimenta una com-
pacientes con sangrado, perforación, obstruc- plicación importante como hemorragia, perfo-
ción y en casos de “intratabilidad”. El momento ración, penetración u obstrucción en el curso
en el que una úlcera debe ser considerada de la enfermedad y aproximadamente el 1%
intratable no ha sido bien definido, y aquí juega una complicación por año.
papel fundamental el juicio clínico experto. El
tratamiento electivo quirúrgico de un paciente HEMORRAGIA
con úlcera péptica es muy infrecuente en la
práctica actual. Sin embargo la excesiva con- La hemorragia es la complicación más fre-
fianza en la fármacoterapia, la incapacidad de cuente; ocurre en 15% de los pacientes con
admitir la falla del tratamiento médico o endos- úlcera y tiene una mortalidad cercana a 10%.
cópico y el exagerado temor de las consecuen- Los pacientes con hemorragia activa deben ir

713
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

a una endoscopia de urgencia para hemosta- bre en la cavidad en unas vías digestivas o
sia, procedimiento que se debe intentar antes en la tomografía axial computadorizada son
de la cirugía, teniendo en cuenta que la ciru- confirmatorias, pero usulamente no son ne-
gía de emergencia está asociada con una ele- cesarias en la mayoría de los casos y pueden
vada mortalidad. Pero diferir la cirugía cuando demorar la cirugía.
ha fallado la hemostasia endoscópica, espe-
cialmente en pacientes de edad avanzada o El tratamiento óptimo es la cirugía. Pero el ma-
con comorbilidad significante, también es cau- nejo no operatorio, que incluye succión naso-
sa de incremento de la mortalidad. gástrica, líquidos endovenosos, antibióticos y
antiácidos por vía endovenosa puede ser exi-
PERFORACIÓN toso en pacientes seleccionados por ser de
alto riesgo quirúrgico en los cuales el cuadro
Las úlceras duodenales, antrales y gástricas clínico cede rápidamente en respuesta al ma-
son las responsables de 60%, 20% y 20% de nejo médico. Los pacientes mayores de 70
las perforaciones por enfermedad ácido-pép- años tienen menor probabilidad de responder
tica, respectivamente. Entre un tercio y la mi- al manejo no operatorio.
tad de las úlceras perforadas están relaciona-
das con el uso de AINES y usualmente ocu- En los pacientes que requieren cirugía, el cie-
rren en pacientes ancianos. rre con parche de epiplón o vagotomía troncu-
lar con piloroplastia (incorporando la perfora-
Debe ser sospechada en todos los pacientes ción) ha sido el procedimiento tradicional utili-
con historia de enfermedad ácido péptica que zado en la úlcera duodenal perforada. Las
se presenten con dolor súbito, severo y gene- ulceras gástricas perforadas se asocian con
ralmente difuso o con cambios en su sintoma- una mayor mortalidad; la gastrectomía parcial
tología usual. Algunos no registran historia de es el procedimiento preferido. Algunos consi-
enfermedad ácido péptica, pero en un interro- deran que al cierre con parche se debe agre-
gatorio detallado se pueden encontrar claves: gar una vagotomía gástrica proximal como for-
generalmente son personas de edad avanza- ma definitiva de terapia en aquellos pacien-
da que reciben AINES. tes que requerirían una segunda intervención.

El diagnóstico rápido es esencial, pues el pro- PENETRACIÓN


nóstico mejora si el paciente se trata en las
primeras seis horas; la mortalidad aumenta Se entiende por penetración cuando la úlce-
luego de 12 horas de la perforación. La histo- ra atraviesa la pared del intestino sin perfora-
ria clínica y el examen físico son fundamenta- ción y sin presencia de líquido intestinal libre
les, porque la perforación es un diagnóstico en la cavidad peritoneal, debido a que se en-
clínico. cuentra limitada por otro órgano vecino. Ocu-
rre en aproximadamente 20% de las ulceras,
La presencia de aire libre en la radiografía de pero sólo una pequeña proporción es clínica-
tórax o eventualmente en la de abdomen verti- mente evidente.
cal o decúbito lateral son sugestivas o diag-
nósticas de perforación; sin embargo, cerca La penetración se hace clínicamente eviden-
del 20% de los pacientes con perforación no te cuando hay un cambio en los síntomas, que
muestran aire libre en la radiografía. La evi- puede ser gradual o súbito, o por compromi-
dencia de medio de contraste hidrosoluble li- so de las estructuras vecinas. Usualmente se

714
CAPÍTULO II: ENFERMEDAD ÁCIDO PÉPTICA

pierden los ciclos de dolor con las comidas y el residuo gástrico y realizar una prueba de
la mejoría con los antiácidos. El dolor se vuel- carga de solución salina puede establecer el
ve más intenso y de mayor duración. Frecuen- diagnóstico de una obstrucción mecánica. El
temente se irradia al tórax bajo o a la región diagnóstico definitivo debe esperar a que se
lumbar superior. Cuando hay penetración de descomprima y se limpie el estómago y se
una úlcera gástrica o duodenal en su pared corrijan las anormalidades de líquidos y elec-
posterior puede encontrarse hiperamilasemia trolitos. El examen endoscópico y la biopsia
leve, franca pancreatitis clínica no es común. constituyen el método más seguro para esta-
blecer el diagnóstico definitivo de la patología
La penetración puede estar asociada con una de base.
amplia gama de complicaciones que incluyen
abscesos periviscerales, erosión de estructu- Las radiografías convencionales del tracto di-
ras vasculares y hemorragia exanguinante gestivo superior brindan una información útil
(fístula aortoentérica, erosión de la arteria cís- pero no son definitivas y no están indicadas
tica), fístula coledocoduodenal, obstrucción bi- en el contexto de un servicio de urgencias, y
liar extrahepática, fístula gastrocólica y mucho menos cuando se prevé cirugía tem-
hemobilia. prana.

OBSTRUCCIÓN El diagnóstico diferencial se hace con las si-


guientes entidades:
La obstrucción es la menos frecuente de las
complicaciones y en la mayoría de los casos Gastroparesia. Las alteraciones de la motili-
se debe a úlceras del canal pilórico o duode- dad son una importante causa de retención y
nal. La obstrucción es responsable de 10-30% los estudios de motilidad están indicados lue-
de los pacientes que van a cirugía, pero esta go de descartar alteraciones estructurales.
proporción parece haber disminuido frente al
sangrado y la perforación, tal vez por los ma- Malignidad. El cáncer siempre debe ser ex-
nejos médicos y endoscópicos más efectivos, cluido en todos los casos de obstrucción pilóri-
que incluyen la habilidad de identificar y re- ca, puesto que actualmente alrededor de 50%
vertir la causa subyacente. Como la úlcera de los casos son debidos a cáncer. Los pacien-
péptica se vuelve cada vez más infrecuente, tes con obstrucción maligna tienden a ser de
la malignidad se ha convertido en la primera mayor edad y típicamente no tienen historia
causa de obstrucción. de úlcera péptica o de uso de AINES. La TAC
es útil en detectar malignidad o para evaluar
Síndrome pilórico. Los síntomas de retención su extensión, aunque un estudio negativo no
gástrica incluyen saciedad temprana, disten- la descarta.
sión, indigestión, anorexia, náusea, dolor epi-
gástrico, vómito y pérdida de peso. El vómito Hipergastrinemia. Se observa en la obstruc-
es el síntoma principal, en 80% de los casos. ción gástrica, presumiblemente porque la dis-
El promedio de duración de los síntomas es tensión del estómago y la comida retenida
de un mes, sin embargo un tercio de estos pa- aumentan la gastrina sérica. Si la hipergastri-
cientes tiene síntomas por más de tres meses. memia persiste luego de que la obstrucción
se haya resuelto, el diagnóstico incluye la in-
La retención puede ser por alteración de la fección por H. pylori y más raramente gastri-
motilidad o por obstrucción mecánica. Medir noma. La hipoclorhidria con o sin hipergastri-

715
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

nemia asociada aumenta la preocupación res- obstrucción. Entonces la vagotomía troncular


pecto a malignidad. y gastroyeyunostomía puede ser el procedi-
miento de elección.
Manejo de la obstrucción. El paso inicial es
confirmar el diagnóstico de retención, para lo
cual se usa la prueba de carga salina. Si la LECTURAS RECOMENDADAS
retención gástrica se confirma, la sonda naso-
gástrica debe ser reemplazada por un tubo 1. Angel L, Gutiérrez O, Rincón D. Epidemiología de
grande de Ewald y el estómago debe ser lava- la enfermedad ácido-péptica. Rev Col Gastro-
enterología 1997; 13:135-144.
do para remover los restos de comida. La son-
2. Aoki T, Takayama S, Nimura H, Tsutsumi J. Effects
da nasogástrica debe ser reinsertada, verifi- of medical treatment on gastric mucosal abnor-
cando su buen funcionamiento. Se debe man- malities in gastroduodenal ulcer disease. World J
tener por los menos durante cinco días para Surg 2000; 24:321-7.
descomprimir el estómago mientras se dan 3. Bardhan KD, Cherian P, Bishop AE, et al. Panto-
líquidos endovenosos y electrolitos y/o nutri- prazole therapy in the long-term management of
severe acid peptic disease: clinical efficacy, safety,
ción parenteral. Se recomienda administrar un
serum gastrin, gastric histology, and endocrine cell
inhibidor de bomba de protones para reducir studies. Am J Gastroenterol 2001; 96:1767-76.
el volumen de ácido, controlar el pH gástrico 4. Cash BD. Evidence-based medicine as it applies
y favorecer la cicatrización de la úlcera. to acid suppression in the hospitalized patient. Crit
Care Med 2002; 30:S373-8.
Una vez el paciente se ha estabilizado y la 5. Cieltelly D, Henao S, Orozco O, et al. Detección
obstrucción gástrica se ha confirmado el si- del Helicobacter pylori en Colombia: diferentes
metodologías aplicadas a su estudio en una po-
guiente paso es identificar y tratar la causa blación de alto riesgo de cáncer gástrico. Rev Col
de base de la obstrucción. Gastroenterología 1999; 14:164-179.
6. Cohen H. Peptic ulcer and Helicobacter pylori.
Los pacientes con obstrucción gástrica por Gastroenterol Clin North Am 2000; 29:775-789.
úlcera péptica tradicionalmente son llevados 7. Gibson JB, Behrman SW, Fabian TC, et al. Gastric
a cirugía, si no hay respuesta favorable, a los outlet obstruction resulting from peptic ulcer disea-
se requiring surgical intervention is infrequently
3 días de succión nasogástrica. Cuando la associated with Helicobacter pylori infection. J Am
causa puede ser revertida, el manejo conser- Coll Surg 2000 Jul;191:32-9
vador merece consideración. La obstrucción 8. Linder JD, Wilcox CM. Acid peptic disease in the
gástrica no es una emergencia. Ambas inter- elderly. Gastroenterol Clin North Am 2001; 30:
venciones, tanto la endoscópica como la qui- 363-76.
rúrgica, deben ser diferidas hasta que el pa- 9. Patiño JF. Enfermedad ulceropéptica. En: Leccio-
nes de Cirugía. Por JF Patiño. Editorial Médica
ciente se encuentre estabilizado. Panamericana. Bogotá, Buenos Aires, 2001.
10. Quan C, Talley NJ. Management of peptic ulcer
Antes de la cirugía se debe realizar endosco- disease not related to helicobacter pylori or
pia y si el canal pilórico puede ser identifica- NSAIDs. Am J Gastroenterol 2002; 97:2950-61.
do, se puede intentar la dilatación en manos 11. Schenk BE, Kuipers EJ, Nelis GF, et al. Effect of
experimentadas. Helicobacter pylori eradication on chronic gastritis
during omeprazole therapy. Gut 2000; 46:615-21.
12. Shiotani A. Pathogenesis and therapy of gastric
Cuando la cirugía es necesaria, la inflamación and duodenal ulcer disease. Med Clin North Am
y la cicatrización hacen difícil e insegura la 2002; 86:1447-1466.
antrectomía, que es la mejor opción, puesto 13. Sierra F. Helicobacter pilary estado actual. rev
que permite resecar la úlcera y controlar la Colomb Cir 2002; 17:128-30.

716
CAPÍTULO III: DOLOR ABDOMINAL AGUDO

CAPÍTULO III

Dolor abdominal agudo

Jorge Alberto Ospina, MD, FACS


Profesor Asociado, Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia.
Director Médico, Clínica del Country.
Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a expresión abdomen agudo, se refiere a


una condición clínica caracterizada por
dolor abdominal, de comienzo rápido, acom-
Un primer elemento en el interrogatorio debe
ser si el cuadro clínico se inició con dolor ab-
dominal, sus características y de cómo ha evo-
pañado generalmente de síntomas gastro- lucionado en ubicación e intensidad.
intestinales y de un compromiso variable del
estado general. Origen del dolor: los impulsos del dolor origi-
nado en la cavidad peritoneal son trasmitidos
Su diagnóstico debe incluir un interrogatorio tanto por vía del sistema nervioso autónomo
preciso, dirigido a evaluar la forma de apari- como por los tractos espinotalámico lateral y
ción, progresión, irradiación, migración, loca- anterior. Los impulsos del dolor conducidos
lización y las condiciones que lo alivian o exa- por el tracto espinotalámico lateral se carac-
terizan fácilmente y tienen buena localización.
cerban.
Es el dolor de irritación peritoneal parietal. El
paciente usualmente localiza el dolor y lo se-
Completado el interrogatorio, se procede con
ñala con uno o dos dedos. Para la correcta
el examen físico detallado que incluye la eva- interpretación del dolor abdominal localizado
luación del estado general, el registro de los es necesario pensar en la anatomía normal:
signos vitales, la inspección, auscultación, per- los órganos duelen donde están localizados.
cusión y palpación abdominal, la búsqueda de
signos específicos y finalmente el examen Los impulsos dolorosos trasmitidos a través
genital y rectal. del sistema autónomo desde los órganos intra-
abdominales se originan en isquemia o dila-
tación de una víscera, o en contracciones
MOTIVO DE CONSULTA peristálticas del músculo liso para vencer una
obstrucción intraluminal. Este dolor no es bien
DOLOR localizado, suele ser difuso y se sitúa general-
mente en la parte media del abdomen. Es el
El síntoma sobre el cual se fundamenta el dolor de irritación peritoneal visceral. El
abdomen agudo es el dolor. Casi se podría paciente no es capaz de localizar su dolor y
afirmar que no existe abdomen agudo sin do- pasea su mano de una manera circular en la
lor abdominal. porción media del abdomen.

717
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Por otra parte, las relaciones anatómicas seg- Diverticulitis de Meckel


mentarias entre las vías autónoma y espino- Pancreatitis
talámica dan origen a dolor visceral referido. Anexitis
El dolor puede no estar localizado en el sitio Diverticulitis
donde existe la patología subyacente, sino que Infecciones del tracto urinario
puede referirse fuera del el abdomen. Proce- Retención urinaria
sos intraabdominales que irritan el diafragma,
como los abscesos subfrénicos, el hemoperi- c. Aparición lenta: el paciente refiere una fe-
toneo o la úlcera perforada, pueden originar cha imprecisa o vaga de aparición del dolor.
impulsos nerviosos que ascienden a través del Causas de dolor de aparición lenta
nervio frénico hasta el nivel de C4 y ser perci- Obstrucción Intestinal baja
bidos hacia la base del cuello o en el hombro. Neoplasias
Enfermedad inflamatoria intestinal
Aparición del dolor: el dolor puede presen- Apendicitis complicada
tarse de manera súbita, gradual o lenta, o Abscesos intraabdominales
puede ser la agudización de un dolor previo,
de cronicidad variable, como ocurre en la úl- Progresión del dolor: debe establecerse, con
cera perforada, la ruptura del aneurisma aórti- precisión, cómo se ha modificado el dolor en el
co o la del embarazo ectópico. curso del tiempo, si se presentan períodos de
remisión, si existe intermitencia, o si se ha pre-
a. Aparición súbita: el dolor se presenta re- sentado alivio y bajo qué condiciones.
pentinamente para alcanzar muy rápida-
mente una gran intensidad que obliga al Migración del dolor: es el cambio en la loca-
paciente a consultar. lización del dolor en el transcurso de la enfer-
Causas de dolor de aparicion súbita: medad: el dolor percibido inicialmente en una
Ulcera péptica perforada determinada localización cambia a otra.
Ruptura de embarazo ectópico
Ruptura de aneurisma aórtico Así el dolor de la apendicitis aguda, inicial-
Disección aórtica mente en el epigastrio, va descendiendo con
Torsión testicular u ovárica el tiempo para situarse luego en la región pe-
Hematoma de la vaina de los rectos riumbilical y finalmente en la fosa ilíaca dere-
Litiasis ureteral cha en el punto de Mc Burney.
Infarto agudo de miocardio
En la colecistitis aguda el dolor se percibe en
b. Aparición gradual: el dolor se presenta el epigastrio y posteriormente migra hacia el
con una intensidad menor; el paciente no hipocondrio derecho. En la diverticulitis agu-
precisa con tanta exactitud la hora de co- da el dolor se siente inicialmente en la región
mienzo; puede continuar parcialmente su periumbilical y con posterioridad se sitúa en
actividad y consulta un poco más tardía- la fosa ilíaca izquierda.
mente que en el caso anterior.
Causas de dolor de aparición gradual: Tipo de dolor: existen muchas formas para
Apendicitis referirse al tipo de dolor: dolor quemante, ar-
Colecistitis dor, punzante, cólico, molestia, pesadez, mor-
Ulcera péptica disco o picada. Sin embargo, en la práctica el
Obstrucción del intestino delgado tipo de dolor puede resumirse así:

718
CAPÍTULO III: DOLOR ABDOMINAL AGUDO

a. Cólico leve: sensación de calambre abdo- Causas de dolor en el hipogastrio


minal, de poca intensidad y rara vez asocia- Apendicitis
do con patología abdominal de importancia. Anexitis
b. Colico intermitente: el dolor es de mayor Embarazo ectópico roto
intensidad, con períodos de exacerbación Torsión ovárica
cortos y de gran intensidad, seguidos de Diverticulitis
alivio por algunos minutos. Es el dolor típi- Mittelschmerz
co de la obstrucción intestinal. Infección urinaria
c. Cólico continuo: es parecido al anterior, Aneurisma aórtico roto
pero los períodos de alivio prácticamente Litiasis ureteral
desaparecen. Esta forma es común en la Aneurisma aórtico roto
obstrucción intestinal alta, la colecistitis Retención urinaria
aguda y la litiasis ureteral. Hernias inguinales
d. Dolor severo continuo: el dolor se man- Hematoma de la vaina del recto abdominal
tiene en el curso del tiempo y su intensidad
no cambia. Es el dolor típico de la ulcera
perforada, la pancreatitis aguda, la sobre- VÓMITO
distensión de vísceras huecas, la perito-
nitis, o el hemoperitoneo. El vómito es el síntoma que más comúnmen-
te acompaña al dolor abdominal en el pacien-
Localización del dolor te con abdomen agudo. Ya se ha menciona-
Causas de dolor epigástrico do que en el abdomen agudo verdadero el
Úlcera péptica dolor es el síntoma inicial y que los síntomas
Úlcera péptica complicada que le acompañan aparecen posteriormente,
Colecistitis aguda aunque el vómito suele aparecer precozmente
Apendicitis (inicialmente)
Pancreatitis El vómito se relaciona con una de las siguien-
Obstrucción intestinal (inicialmente) tes causas:
Absceso hepático
Absceso subfrénico Vómito reflejo secundario a inflamación pe-
Esplenomegalia ritoneal parietal o visceral. Este tipo de vó-
Hepatomegalia mito ocurre precozmente, pero usualmente
Pleuritis y neumonías basales sigue al dolor. Puede ser precedido o no de
Infarto agudo de miocardio náuseas y su contenido es gástrico y con mí-
nima cantidad de bilis. Cuando la enfermedad
Causas de dolor en mesogastrio es más severa, el vómito se repite y cada vez
Apendicitis (inicialmente) su contenido es de aspecto más intestinal (ver-
Obstrucción intestinal de) y menos gástrico (claro, alimentos). En la
Pancreatitis medida que la enfermedad abdominal progre-
Hernias epigástrica o umbilical sa y la inflamación intraperitoneal se extien-
Eventración de, las náuseas y el vómito pueden hacerse
Isquemia o gangrena intestinal más frecuentes.
Diverticulitis colónica
Diverticulitis de Meckel Vómito por obstrucción del tracto gastro-
Ruptura de aneurisma aórtico intestinal o de una víscera hueca. En la

719
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dilatación aguda del estómago el contenido del Los antecedentes de deposiciones sanguino-
vómito suele ser abundante, de olor caracterís- lentas, deben alertar sobre patología colónica,
tico, mínimamente mezclado con bilis y acom- principalmente diverticulitis y carcinoma. La
pañado de distensión dolorosa que alivia el acolia indica la existencia de ictericia de tipo
vómito. Esta condición clínica acompaña al íleo obstructivo.
postoperatorio, al trauma abdominal, a la diabe-
tes y a procesos infiltrativos gástricos (linfoma). La distensión abdominal también acompaña a
muchos procesos abdominales. Es producto de
El vómito de la obstrucción pilórica en el adulto la dilatación intestinal causada por íleo reflejo
es esencialmente de contenido gástrico claro, u obstrucción mecánica. Es común en la perito-
no mezclado con bilis, se acompaña de regur- nitis, la pancreatitis y la obstrucción intestinal.
gitación, es abundante y su contenido se re- Es mayor en la obstrucción intestinal baja que
laciona con alimentos ingeridos previamente. en la obstrucción del intestino delgado proximal.

En la obstrucción del intestino delgado el vó-


mito puede ser inicialmente reflejo y de con- SÍNTOMAS GENITOURINARIOS
tenido alimenticio o claro. El olor cambia del
olor gástrico característico a un olor fecaloide, Se puede presentar disuria o aumento de la
que refleja la descomposición bacteriana del frecuencia urinaria más comúnmente en la
contenido intestinal. infección urinaria, pero también en procesos
inflamatorios pélvicos relacionados con apen-
Vómito originado en el sistema nervioso dicitis, anexitis, diverticulitis complicada y
central. La causa del vómito puede ser secun- embarazo ectópico.
daria a irritación del sistema nervioso central.
Este origen del vómito debe tenerse en cuen- La hematuria suele acompañar a procesos
ta especialmente en pacientes traumatizados. infecciosos, litiasis, trauma o neoplasia del
El médico tiene la tendencia a ubicar la causa árbol urinario. Sin embargo, la presencia de
del vómito en el tracto gastrointestinal, olvi- hematuria en pacientes con abdomen agudo
dando que el vómito puede ser causado por debe hacer sospechar litiasis.
lesiones que ocupan espacio en el cráneo.
La historia de retardo menstrual o amenorrea
reciente, debe conducir a la investigación de
ANORMALIDADES embarazo ectópico.
EN LA FUNCIÓN INTESTINAL
En igual forma como se han investigado las EXAMEN FÍSICO
características del dolor y del vómito deben
averiguarse las alteraciones de la función in- EVALUACIÓN GENERAL
testinal en el abdomen agudo.
El médico debe estar atento al relato del pa-
El ileo reflejo que acompaña a la mayoría de ciente mientras observa su apariencia gene-
los procesos inflamatorios intraperitoneales ral, sus gestos de dolor y su actitud. Se exa-
hace que el paciente manifieste sensación de mina el estado de las mucosas para estable-
distensión, incapacidad para pasar flatos y cer el grado de hidratación, la presencia de
constipación. ictericia y el color de las mismas.

720
CAPÍTULO III: DOLOR ABDOMINAL AGUDO

Pulso y temperatura. El pulso rápido puede Auscultación. Aunque se tiene la tendencia


estar relacionado con el aumento de la tem- a auscultar muy rápidamente el abdomen, las
peratura o ser la primera manifestación de características de los ruidos intestinales pue-
shock hipovolémico. den ser de gran valor y por tanto deben anali-
zarse con tiempo suficiente.
La presencia de fiebre se relaciona con proce-
sos inflamatorios intraperitoneales, no necesa- Debe registrarse la intensidad, frecuencia y
riamente de origen bacteriano. La coexisten- tono de los ruidos intestinales. En términos
cia de escalofrío hace pensar en bacteremia. generales, la ausencia completa de ruidos in-
testinales tiene la connotación de catástrofe
La elevación de la temperatura por encima de abdominal con peritonitis.
39o C es común en casos de peritonitis, salpin-
gitis, pielonefritis e infección urinaria. Es ca- Los sonidos intestinales del íleo reflejo se en-
racterística la presentación en picos febriles cuentran disminuidos en intensidad y frecuen-
de los abscesos intraabdominales. En los ex- cia, pero rara vez están ausentes.
tremos de la vida o en pacientes sépticos, la
hipotermia, más que la fiebre, puede ser sig- Percusión. Permite averiguar si la distensión
no de un proceso intraperitoneal. abdominal obedece a líquido o a gas intraperi-
toneal y su distribución.

EXAMEN ABDOMINAL La percusión de vísceras sólidas como el bazo


o el hígado permite establecer clínicamente
Inspección. Es indispensable tomarse el tiem- su tamaño. La pérdida de la matidez del híga-
po necesario para hacer una adecuada inspec- do es característica de la presencia de aire
ción. Se debe descubrir la totalidad del abdo- libre intraperitoneal secundaria a la ruptura de
men, incluida la parte inferior del tórax, los geni- una víscera hueca, más frecuentemente el
tales y las regiones inguinales. En primer tér- estómago, el duodeno o el colon.
mino se observa el color de la piel, la presen-
cia de hernias o cicatrices que orienten hacia La percusión de las distintas zonas del abdo-
el diagnóstico de obstrucción intestinal, o per- men, empezando por las zonas de menos
mitan concluir que el paciente ya tuvo, por ejem- dolor, hasta llegar a la zona donde el dolor es
plo, una apendicectomía previa. La coloración más intenso, permite evaluar la irritación
azul del ombligo (signo de Cullen) puede ver- peritoneal sin necesidad de recurrir al moles-
se en pacientes con sangrado intraperitoneal to signo de rebote (Blumberg). El hecho de
y la equimosis en los flancos y la región dorsal que la percusión despierte un intenso dolor
puede verse en hemorragias retroperitoneales en una determinada área puede ser interpre-
asociadas a pancreatitis o ruptura de aneuris- tado, sin duda, como un signo característico
ma aórtico (signo de Grey Turner). de irritación peritoneal.

Se debe observar el contorno abdominal, si Palpación. Se establece inicialmente la tex-


existe distensión, excavación, pulsaciones o tura de la pared abdominal buscando zonas
masas anormales y el grado de tensión en la de mayor rigidez, mientras se observa cuida-
pared abdominal. Una severa distensión ab- dosamente la cara del paciente en búsqueda
dominal está asociada a íleo reflejo u obstruc- de signos de dolor. A medida que la palpación
tivo o a peritonitis generalizada. progresa, se va haciendo mas profunda

721
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

evaluando la contractura de la pared abdomi- EXÁMENES COMPLEMENTARIOS


nal y la presencia de defensa o dolor en pun-
tos determinados. PRUEBAS DE LABORATORIO

El hallazgo de defensa localizada a una re- Hemograma: el descenso en la hemoglobina


gión específica del abdomen hace pensar que y el hematocrito, en presencia de dolor abdo-
existe proceso irritativo local. minal debe ser interpretado como causado por
sangrado intraperitoneal. Un descenso en el
recuento de eritrocitos es indicativo de pérdi-
SIGNOS ESPECIALES da crónica de sangre como puede ocurrir en
la enfermedad ulcerosa péptica o en algunas
Signo del psoas: con el paciente acostado neoplasias del tracto gastrointestinal.
en decúbito supino y la extremidad inferior
La leucocitosis puede ser un hallazgo común
completamente extendida se le pide la eleve
en las entidades que producen inflamación
mientras el examinador le ofrece resistencia.
intraperitoneal. Sin embargo, algunas de ellas
Si esta maniobra despierta dolor, se puede
pueden cursar con recuento leucocitario nor-
concluir que existe un proceso irritativo sobre
mal o aun bajo, como ocurre en estados sép-
el músculo psoas, relacionado con un proce-
ticos avanzados y en los extremos de la vida,
so apendicular o un absceso retroperitoneal,
hecho asociado, en general, a mal pronóstico.
aunque también puede observarse en her-
nias discales lumbares bajas.
QUÍMICA SANGUÍNEA:
Signo de Rovsing: es característico de la
apendicitis aguda, y consiste en la aparición a. Bilirrubinas: encontrar una bilirrubina ele-
de dolor en el punto de McBurney mientras vada es confirmatorio del hallazgo clínico
se palpa o se percute la fosa ilíaca izquierda. de ictericia. Cuando esta elevación se hace
a expensas de la bilirrubina directa, puede
Signo de Murphy: mientras se palpa el pun- relacionarse con colestasis secundaria a
to cístico se pide al paciente que haga una obstrucción biliar.
inspiración profunda. Este signo caracteriza b. Fosfatasa alcalina: puede elevarse en
a la colecistitis aguda cuando se produce la colestasis, pero no permite distinguir si la
detención repentina de la inspiración. Puede colestasis es extra o intrahepática, siendo
presentarse también en procesos inflamato- por ello un dato poco específico.
rios relacionados con el hígado y en los pro- c. Electrolitos: al igual que otras pruebas son
cesos pleuropulmonares basales derechos. el reflejo del trastorno homeostático pro-
ducido por el vómito, la diarrea o la pérdi-
Signo de Kehr: consiste en la aparición de da de líquidos en un tercer espacio.
dolor referido a los hombros, especialmente d. Glicemia: el hallazgo de glucemia elevada
el izquierdo cuando se palpa la región supe- puede reflejar solamente la respuesta
rior del abdomen, y caracteriza clásicamente metabólica a la infección. No obstante, en
a la ruptura esplénica. Este signo se hace más pacientes diabéticos puede ser el principal
evidente en posición de Trendelenburg. indicador de una descompensación origi-
nada en una infección intraperitoneal.
e. Nitrógeno ureico y creatinina séricos: el uso
de estas pruebas está encaminado a esta-

722
CAPÍTULO III: DOLOR ABDOMINAL AGUDO

blecer más el estado de la función renal IMÁGENES DIAGNÓSTICAS


que a confirmar un diagnóstico específico.
f. Amilasas: es común el uso de la determi- RADIOGRAFÍA DE TÓRAX
nación de amilasas para confirmar el diag-
nóstico de pancreatitis. La amilasa pan- En la evaluación del dolor abdominal agudo la
creática se eleva en cerca del 80% de los radiografía del tórax puede tener gran utilidad.
pacientes con pancreatitis aguda. Permite descartar o confirmar la presencia de
g. Gonadotropina coriónica (HCG): más de procesos pleuropulmonares que puedan ser
95% de las mujeres con embarazo ectópico causa de dolor abdominal. Sin embargo, el ha-
tienen una prueba de embarazo positivo. llazgo de derrame pleural o atelectasias basa-
Cuando se emplea la medición de la les es común en pacientes con patología ab-
subunidad beta la especificidad aumenta. dominal y sería un error interpretar el dolor
h. Proteína C reactiva: es indicador no espe- abdominal como causado por este hecho.
cífico de inflamación aguda.
En la radiografía tomada de pie debe buscar-
se la presencia de aire libre subdiafragmático
URONÁLISIS que es siempre indicativo de ruptura de vís-
cera hueca.
Idealmente la muestra debe obtenerse en for-
ma limpia, con lavado de la región genital y
toma de la muestra en mitad de la micción. RADIOGRAFÍA SIMPLE DE ABDOMEN
Sólo en casos seleccionados se requiere la
cateterización vesical. El hallazgo de densi- El aire puede no estar libre completamente
dad urinaria elevada es reflejo del estado de en la cavidad pero puede dibujar el riñón de-
deshidratación. La presencia de glucosa es recho (retroneumoperitoneo) en casos de rup-
manifestación de hiperglicemia en un pacien- tura duodenal. La presencia de neumobilia es
te diabético descompensado por infección. La consistente con el diagnóstico de fístula bilio-
proteinuria puede ser indicativa de enferme- entérica o puede encontrarse después de ope-
dad renal. La leucocituria sugiere el diagnós- raciones de derivación biliodigestiva (esfintero-
tico de infección urinaria, aunque también pue- plastia, coledoco-duodenostomía). Puede ob-
de presentarse cuando existe inflamación de servarse dibujada la pared vesicular por aire
órganos adyacentes al tracto urinario. No obs- en casos de colecistitis enfisematosa de co-
tante, cuando el recuento leucocitario es ma- mún ocurrencia en pacientes diabéticos des-
yor de 20 por campo es altamente sugestivo compensados con abdomen agudo.
de infección urinaria. Una prueba útil es la
realización de coloración de Gram del sedi- Debe observarse cuidadosamente la distribu-
mento urinario o urocultivo para confirmar la ción del patrón gaseoso intestinal. Normal-
infección. mente el aire se encuentra solamente en el
colon. El hallazgo de aire dentro del intestino
La hematuria siempre es anormal. Un recuen- delgado siempre es anormal. Para establecer
to de hematíes bajo es posible en cuadros de el diagnóstico de obstrucción intestinal de-
infección urinaria; sin embargo, cuando la ben existir tres elementos:
hematuria es mayor se debe sospechar la pre-
sencia de litiasis, trauma o neoplasia. a. Distensión de asas proximales al sitio de
obstrucción.

723
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

b. Ausencia de gas distal al sitio de la obs- ECOGRAFÍA ABDOMINAL


trucción.
c. Presencia de niveles hidroaéreos escalo- El ultrasonido puede ser útil en el diagnóstico
nados. de algunas entidades causantes de abdomen
agudo. Sin embargo, debe tenerse en mente
La obstrucción colónica es menos frecuente que su sensibilidad y especificidad son depen-
que la obstrucción del intestino delgado y es dientes del operador.
generalmente debida a vólvulo o neoplasia.
Se caracteriza por la dilatación del colon proxi- Su principal uso es en el diagnóstico de la
mal, con ausencia de gas distal al sitio de obs- enfermedad biliar. Para diagnosticar cálculos
trucción y de acuerdo a la competencia de la vesiculares deben existir tres elementos:
válvula ileocecal, puede verse dilatación se-
cundaria del intestino delgado. En el vólvulus a. Un foco ecogénico dentro de la luz vesicular
del sigmoide la imagen es característica y con- b. Movimientos gravitacionales de ese foco
siste en una dilatación masiva del colon con con los cambios de posición.
un asa que semeja un neumático cuya conve- c. Producción de una sombra acústica sub-
jidad ocupa la porción derecha del abdomen. yacente a ese foco ecogénico.
En el vólvulos del ciego hay dilatación masiva
de éste, y se ubica en el cuadrante superior Se ha empleado también para el diagnóstico
izquierdo dando la imagen característica del de apendicitis, cada vez con mayor frecuencia,
grano de café. Cuando el ciego alcanza un especialmente en niños. El hallazgo de un
diámetro mayor de 10 cm puede decirse que apéndice mayor de 7 mm, no compresible,
existe una inminencia de perforación. constante en varias imágenes sugiere el diag-
nóstico de apendicitis. En la mujer con dolor
En aneurismas puede hallarse calcificación y
abdominal bajo la ultrasonografía juega un pa-
dilatación de la aorta abdominal.
pel importante. Puede confirmar la presencia
El borramiento de las líneas de los psoas, la de embarazo ectópico, anormalidades infla-
obliteración de la grasa paracólica y la situa- matorias de los anexos o la presencia de ma-
ción medial y separada de las asas son sig- sas ováricas.
nos de la presencia de líquido intraabdominal.
TOMOGRAFÍA AXIAL COMPUTADORIZADA
UROGRAFÍA EXCRETORA (TAC)

Hoy ha sido reemplazada en gran parte por la Preferentemente la TAC debe realizarse em-
ultrasonografía (ecografía), y sólo se realiza pleando medio intravenoso y oral. Permite
en pacientes seleccionados, es especialmen- evaluar detalladamente las vísceras sólidas y
te útil para establecer la obstrucción del trato las estructuras retroperitoneales (páncreas,
urinario en pacientes con sospecha de litiasis. aorta). Es de gran valor en el diagnóstico de
abscesos intraperitoneales y en casos selec-
cionados puede ser útil para realizar drenaje
RADIOGRAFÍAS CON MEDIO DE CONTRASTE percutáneo. Cuando se sospecha diverticulitis,
la tomografía puede ser de gran utilidad para
Rara vez están indicadas en el estudio diag- confirmar el diagnóstico y de hecho constitu-
nóstico del abdomen agudo. ye el estudio de elección.

724
CAPÍTULO III: DOLOR ABDOMINAL AGUDO

En casos de apendicitis de difícil diagnóstico LECTURAS RECOMENDADAS


la TAC puede ser de gran valor y está indica-
da casi de rutina. Si bien la TAC está siendo 1. Boleslawski E, Panis Y, Benoist S, et al. Plain ab-
empleada cada vez con mayor frecuencia en dominal radiography as a routine procedure for
la evaluación y diagnóstico de muchas condi- acute abdominal pain of the right lower quadrant:
prospective evaluation. World J Surg 1999;
ciones abdominales, en ningún caso debe re-
23:262-4.
emplazar la completa evaluación y el juicio clí- 2. Chen SC, Chen KM, Wang SM, et al. Abdominal
nico que hemos mencionado a lo largo de esta ultrasound screen of clinically diagnosed or
guía. suspected appendicitis before surgery. World J
Surg 1998; 22: 449-452.
3. Decadt B, Sussman L, Lewis MP, et al. Randomi-
ELECTROCARDIOGRAMA (ECG) zed clinical trial of early laparoscopy in the mana-
gement of acute non-specific abdominal pain. Br
J Surg. 1999; 86:1383-6.
Todo paciente con factores de riesgo para
4. Larsson PG, Henriksson G, Olsson M, et al.
enfermedad coronaria, debe tener un ECG en Laparoscopy reduces unnecessary appendicecto-
el curso de la evaluación por dolor abdomi- mies and improves diagnosis in fertile women. A
nal. Este permite establecer la existencia de randomized study. Surg Endosc 2001; 15:200-2.
infarto agudo del miocardio o detectar anor- 5. Maddaus MA, Ahrenholz D, Simmons R. The
malidades del ritmo como la fibrilación auri- biology of peritonitis and its implications for treat-
cular que puedan complicarse con embolia ment. Surg Clin North Am 1988; 68: 431-443.
mesentérica. 6. Memom MA, Fitzgibbons RL. The role of minimal
access surgery in the acute abdomen. Surg Clin
North Am 1997, 77:1333-1353.
7. Roy S, Weimershweimer P. Non operative causes
LAPAROSCOPIA of abdominal pain. Surg Clin North Am 1997;
77:1433-1454.
La experiencia cada día mayor que se viene 8. Sawyers JL, Williams LF. The acute abdomen.
acumulando con la colecistectomía laparos- Surg Clin North Am 1988; 68: 233 - 470.
cópica ha incrementado el uso de esta herra- 9. Schecter WP Peritoneum and Acute Abdomen. En:
mienta en el diagnóstico del abdomen agudo. Norton JA, Bollinger AA, Chang AE (Eds). Surgery.
Basic Science and clinical evidence. Springer. New
Por ser un procedimiento invasivo, no caren-
York, 2001.
te de complicaciones y que requiere aneste- 10. Shuman WP, Ralls PW, Balfe DM, et al. Imaging
sia general, su uso se reserva para casos di- evaluation of patients with acute abdominal pain
fíciles con lo cual se evita el retardo en el diag- and fever. American College of Radiology. ACR
nóstico y se disminuye la tasa de laparotomías Appropriateness Criteria. Radiology. 2000; 215
innecesarias. Suppl: 209-12.
11. Trunkey DD. Torso trauma. Curr Probl Surg. 1987;
Su uso actual se encuentra centrado funda- 24:209-65.
12. Welch CE, Malt RA. Abdominal Surgery (First of
mentalmente en el diagnóstico y manejo de
Three parts). N Engl J Med. 1983; 308:624 - 632.
la apendicitis aguda, en el tratamiento de la 13. Welch CE, Malt RA. Abdominal Surgery (Second
colecistitis aguda y en algunas condiciones of three parts) N Engl J Med.. 1983; 308: 685 -
ginecológicas como el embarazo ectópico. 695.
14. Welch CE, Malt RA. Abdominal Surgery (Third of
three parts) N Engl J Med 1983; 308:753 – 760.

725
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IV

Apendicitis aguda en adultos

Roosevelt Fajardo, MD
Sección de Cirugía General
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a apendicitis aguda constituye la condición


inflamatoria aguda abdominal más fre-
cuente: aproximadamente 7% de la población
El apéndice recibe irrigación de la rama apen-
dicular de la arteria ileocólica y el drenaje lin-
fático es a través de los ganglios que corren a
general sufre apendicitis en el curso de su lo largo de la arteria ileocólica. La inervación
vida. se deriva del plejo mesentérico superior (T10-
L11).
La apendicitis aguda se puede presentar en
cualquier edad; su incidencia aumenta durante La inflamación del apéndice comienza con la
la infancia y alcanza un pico entre los 10 y 30 obstrucción de la luz apendicular, lo que trae
años, declinando a partir de la cuarta década. como consecuencia un incremento de la pre-
En los adultos jóvenes la relación hombre: mu- sión intraluminal por el acúmulo de moco aso-
jer es de 3:1, igualándose a la edad de 30 ciado con poca elasticidad de la serosa. El
años. incremento de la presión compromete prime-
ro el retorno venoso y linfático. Si el proceso
continúa, la presión intraluminal excede la pre-
FISIOPATOLOGÍA sión capilar, produciendo isquemia de la mu-
cosa y luego perforación del apéndice.
En la sexta semana del desarrollo embriona-
rio aparece el ciego como una estructura coni- Junto con los cambios locales en la zona del
forme sacular, derivada de la parte caudal del apéndice, ocurre una respuesta inflamatoria
intestino medio; la punta del apéndice comien- regional mediada por el mesotelio y los vasos
za su elongación hacia el quinto mes, hasta sanguíneos del peritoneo parietal. En una se-
alcanzar su forma de apariencia de lombriz, y cuencia de eventos inflamatorios, la salida de
de allí el nombre de vermiforme. neutrófilos y otros mediadores de inflamación
a partir del apéndice y las estructuras adya-
La ubicación del apéndice es variada. Puede centes lleva a una respuesta inflamatoria local
localizarse sobre el aspecto posteromedial del que tiende a limitar el proceso. En esta fase
ciego, en la unión de las tres tenias. La punta puede ocurrir perforación, la cual puede ser
exhibe diferentes localizaciones: retrocecal “sellada” por las estructuras adyacentes; si ello
65,2%, pélvica 31%, subcecal 2,2%, paraileal no ocurre, se produce derramamiento del con-
1% y paracólica 0,4%. tenido del apéndice, con la consecuente

726
CAPÍTULO IV: APENDICITIS AGUDA EN ADULTOS

peritonitis severa, retención líquida en “tercer El examen físico se caracteriza por dolor a la
espacio”, shock y muerte en un porcentaje sig- palpación en el cuadrante inferior derecho,
nificativo de los casos. clásicamente en el sitio descrito por Charles
McBurney (1845-1913), que se conoce como
“punto de McBurney” (centro de una línea tra-
EVALUACIÓN zada entre el ombligo y la espina iliaca ante-
rior y superior, correspondiente al sitio de im-
El objetivo del tratamiento quirúrgico de la plantación del apéndice en el ciego). Los sig-
apendicitis consiste en la remoción del apén- nos de irritación peritoneal, como el de Jacob
dice inflamado antes de que se produzca su Moritz Blumberg (1873-1955), en el que la
perforación, tratando de realizar un número descompresión brusca de la región cecal es
mínimo de apendicectomías en blanco. Este más dolorosa que la compresión misma, el
objetivo presume que la perforación tiene re- espasmo muscular y los de deshidratación,
lación directa con el tiempo que transcurre como la mucosa oral seca y taquicardia, se
entre el inicio de los síntomas y el tratamiento presentan en los casos más avanzados. El
quirúrgico. tacto rectal dirigido hacia la fosa ilíaca derecha
produce dolor, pero hoy es un examen que no
Numerosos estudios han demostrado que la se practica sino en casos seleccionados.
tasa de perforación apendicular está relacio-
nada con la demora en el diagnóstico; tal La presentación atípica ocurre cuando hay
demora puede evitarse mediante la educación perforación con algún grado de peritonitis. El
de la población general sobre cuándo acudir cuadro puede incluir fiebre, escalofríos y do-
al médico en presencia de un dolor abdominal. lor abdominal difuso; el examen físico mues-
tra defensa (espasmo) muscular, signos de
En un estudio realizado por Temple se hizo la peritonitis difusa, íleo, distensión abdominal
monitoría de 95 pacientes con signos y sínto- y, ocasionalmente en el caso de plastrón o
mas de apendicitis aguda. Tres pacientes tu- absceso, una masa palpable.
vieron perforación antes de 24 horas y sólo
uno tuvo perforación antes de 10 horas. El Una vez ocurre la perforación del apéndice,
tiempo promedio entre la aparición de los sín- se desencadenan otras complicaciones como
tomas y la perforación fue de 64 horas. obstrucción intestinal, absceso hepático e in-
cluso pileflebitis.

DIAGNÓSTICO En pacientes con patología asociada como


diabetes mellitus, insuficiencia renal crónica
El diagnóstico de la apendicitis aguda es esen- (IRC), en niños y en ancianos, en obesos y
cialmente clínico. Al comienzo de la enferme- en mujeres embarazadas o en edad fértil, el
dad, el paciente refiere dolor abdominal difu- diagnóstico clínico es más difícil. Por ejem-
so, de tipo cólico y ubicación periumbilical, que plo, los pacientes diabéticos y los que cursan
posteriormente se localiza en el cuadrante in- con IRC presentan dolor abdominal inespecí-
ferior derecho, acompañado de náusea, fico y generalmente de manera tardía. En las
vómito y fiebre. Cuando hay vómito, se pre- pacientes embarazadas la apendicitis se pre-
senta luego del dolor y se reduce a uno o dos senta más frecuentemente durante el primer
episodios. trimestre; la localización del apéndice es muy
variable; inicialmente se desplaza lateralmente

727
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

y luego rota para posteriormente ubicarse en controversia. En la apendicitis aguda no ha


posición más alta. El diagnóstico diferencial demostrado la presencia de fecalito en más
en mujeres jóvenes en edad reproductiva se de 50% de los casos. Nitecki S y su grupo de
debe hacer con diversas patologías gineco- la Clínica Mayo demostraron la presencia de
lógicas. fecalitos en 10% de pacientes con apendicitis
no complicada, 20% de pacientes con apen-
Ante la sospecha clínica de apendicitis se dicitis perforada y 40% de pacientes con abs-
deben ordenar exámenes de laboratorio, que ceso apendicular. Aunque en los jóvenes se
incluyan hemograma, uroanálisis y prueba de podría decir con estos hallazgos que no es
embarazo en las mujeres en edad reproduc- costo-efectiva, la radiografía simple de abdo-
tiva. En general el recuento de leucocitos en men debe realizarse en población mayor como
sangre aparece moderadamente elevado y en imagen diagnóstica inicial, que sirve para acla-
la mayoría de los casos hay desviación a la rar otras condiciones anormales.
izquierda, pero en un porcentaje bajo (gene-
ralmente <5%), aunque significativo, tanto el La ultrasonografía tiene una sensibilidad de
recuento de glóbulos blancos como la fórmu- 75-90% y una especificidad de 86-100%. Se
la diferencial son normales. Se debe tener en debe tener en cuenta que se trata de un exa-
cuenta que el recuento globular blanco tiene men operador-dependiente, y que presenta
baja sensibilidad (78%) y especificidad (51%), dificultades técnicas en pacientes obesos o
con un valor predictivo muy bajo (25%), como con distensión abdominal, donde se interpo-
lo demostraron Vargas y colaboradores de ne gas. En mujeres jóvenes en quienes se de-
México. El uroanálisis es de ayuda para el be descartar patología ginecológica, la eco-
diagnóstico diferencial con urolitiasis o infec- grafía pélvica o transvaginal puede ser de
ción de las vías urinarias, siendo ésta más fre- gran ayuda.
cuente en mujeres.
La tomografía axial computadorizada (TAC) es
Los hombres jóvenes con cuadro clínico típi- considerada el “patrón oro” como examen diag-
co y recuento leucocitario mayor de 12.000 nóstico no invasor en la apendicitis aguda.
con desviación a la izquierda, generalmente Puede detectar y localizar masas inflamatorias
deben ser llevados a cirugía sin otros exáme- periapendicualres (plastrones), abscesos (algo
nes diagnóstico adicionales. similar como en la diverticulitis) y, con gran pre-
cisión la apendicitis aguda. Naturalmente, por
La medición de enzimas hepáticas y de amila- su costo, es un examen para ser practicado
sa puede ser útil para el diagnóstico diferen- sólo en pacientes seleccionados.
cial con patología hepatobiliar, sobre todo
cuando el dolor se localiza en el mesogastrio La laparoscopia diagnóstica no debe consi-
o el epigastrio. La amilasa sérica puede estar derarse como una herramienta diagnóstica
elevada en 3-10% de pacientes con apendi- inicial, ya que es un procedimiento invasor que
citis aguda. requiere anestesia general; sin embargo, la
laparoscopia puede reducir la tasa de perfo-
IMÁGENES DIAGNÓSTICAS ración y la morbimortalidad, especialmente en
mujeres en edad reproductiva y en ancianos.
La radiografía simple de abdomen se debe Si en la laparoscopia diagnóstica el apéndice
realizar en todo paciente que consulte por no se encuentra inflamado, debe resecarse
dolor abdominal, aunque esto es motivo de de igual manera.

728
CAPÍTULO IV: APENDICITIS AGUDA EN ADULTOS

Cuando los síntomas sugieran plastrón y/o abs- do a laparotomía a través de una incisión de
ceso se debe practicar ecografía (ECO) y/o TAC línea media. Se toman muestras del líquido
abdominal para confirmar el diagnóstico, y prac- peritoneal para coloración por Gram y cultivo.
ticar drenaje percutáneo en radiología, si la La herida se deja abierta para cierre primario
colección es abordable por este método. tardío (laparostomía).

En los casos en que el diagnóstico se haga


TRATAMIENTO por laparoscopia, se realiza una apendicec-
tomía asistida.
Cuando se sospecha apendicitis se debe ca-
nalizar una vena e iniciar hidratación con cris-
taloides. Una vez establecido el diagnóstico CONSIDERACIONES ESPECIALES
de apendicitis aguda, se lleva el paciente a
cirugía; se aplican antibióticos profilácticos, en EDAD AVANZADA
dosis única, durante la inducción anestésica
con un agente que cubra microorganismos Se reconoce que los pacientes de edad avan-
Gram negativos y anaerobios, en los siguien- zada con apendicitis presentan menos sínto-
tes esquemas: mas, ausencia de signos agudos y con mayor
frecuencia se los registra libres de leucocitosis.
• Clindamicina 600 mg y amikacina 1g; Hasta 30% de los pacientes de edad avanza-
• Metronidazol 500 mg y gentamicina 80 mg; da acuden al servicio de urgencias con cua-
• monoterapia con sulbactam-ampicilina 3 g, dros de más de 48 horas de evolución. Entre
cefoxitín 1g u otros de acuerdo a la sensi- 50% y 70% tienen perforación en el momento
bilidad de la flora en cada hospital. de la cirugía. La TAC de abdomen es de gran
utilidad para establecer un diagnóstico preope-
Cuando se hace el diagnóstico de absceso ratorio exacto.
por ecografía o por TAC, hay dos posibilida-
des terapéuticas: EMBARAZO

• Drenaje percutáneo, en caso de que el El diagnóstico de apendicitis aguda durante


compromiso sistémico del paciente sea im- el embarazo representa uno de los mayores
portante y la localización de la colección lo retos diagnósticos. En el primer trimestre, la
permita. Se realiza apendicectomía diferi- evolución de los signos y síntomas no es dife-
da en 6 a 8 semanas. rente de la de una mujer no embarazada, pero
• Operación: laparotomía y apendicectomía después del quinto mes el ciego y el apéndi-
en el mismo tiempo operatorio. En ambos ce son movilizados hacia el flanco derecho e
casos es necesario el uso de antibióticos incluso hacia el hipocondrio derecho, por lo
terapéuticos. El uso de drenes en cirugía cual la sintomatología de dolor y el examen
está restringido a dos situaciones: cuando de la fosa iliaca derecha se hacen muy dife-
hay una cavidad para drenar, y cuando hay rentes. En estas condiciones el ultrasonido es
dudas sobre el cierre del muñón apendicu- de gran utilidad.
lar en la base del ciego.
Se den tener en cuenta las siguientes consi-
En presencia de un cuadro de abdomen agu- deraciones:
do con peritonitis, el paciente debe ser lleva-

729
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• La apendicitis se puede presentar en cual- LECTURAS RECOMENDADAS


quiera de los tres trimestres del embarazo.
• La progresión a perforación es más común 1. Dais DG, Shaffer M. The epidemiology of
en el tercer trimestre por la demora en el appendicitis and appendectomy in the United
diagnóstico. States. Am J Epidemiol 1990; 132:910-925.
2. Gronroos JM, Gronroos P. Leucocytes count and
• La mortalidad fetal es menor de 5% si se
C reactive protein in the diagnosis of acute
realiza la apendicetomía antes de que ocu- appendicitis. Br J Surg 1999; 86:501-504.
rra perforación, pero puede llegar a 20% si 3. Grunewald B, Keating J. Should the normal
ésta se presenta. appendix be removed at operation for appendicitis.
J R Coll Surg Edin 1993; 38:158-160.
Por las consideraciones anteriores, la tenden- 4. Nitecki S, Karmeli R, Sarr MG. Appendiceal calculi
cia es a proceder con la exploración quirúrgi- and fecaliths as indications for appendectomy.
ca en casos dudosos, lo cual se refleja en ta- Surg Gynecol Obstet 1990; 171:185-188.
5. Patiño JF. Apendicitis aguda. En: Lecciones de
sas de laparotomías negativas hasta de 40%.
Cirugía. Por JF Patiño. Editorial Médica Paname-
ricana. Bogotá-Buenos Aires, 2001.
Otra consideración es, si se debe o no someter 6. Scott JH, Amin M. Abnormal urianalysis in
a la paciente embarazada a exploración lapa- appendicitis. J Urol 1983; 129:1015-1018.
roscópica. Se sabe que en el último trimestre 7. Temple CL, Huchcroft SA. The natural history of
del embarazo es técnicamente difícil realizar appendicitis in adults: a prospective study. Ann
el procedimiento por laparoscopia; sin embar- Surg 1995; 221:278-281.
go, en el primer y segundo trimestre se puede 8. Vargas Domínguez A, Ortega León LH, Miranda
Fraga P. Sensibilidad, especificidad y valores
realizar la exploración laparoscópica, y si es
predictivos de la cuenta leucocitaria en apendicitis.
necesario, la apendicectomía asistida. Hay Ciruj General (México) 1994: 16: 1-7.
interrogantes respecto a la seguridad de la 9. Wangensteen OH. Experimental proof of the
hipercapnia para el feto, así como sobre la obstructive origin of the appendicitis in man. Ann
repercusión del incremento en la presión intra- Surg 1939; 119:629-647.
abdominal sobre el flujo sanguíneo útero-pla- 10. Wilcox R, Traversa W. Have the evaluation and
centario. Siendo un procedimiento que susci- treatment of acute appendicitis changed with new
ta controversia, la apendicectomía abierta re- technology. Surg Clin North Am 1997; 77:1335-
1370.
sulta más rápida y segura.

730
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Colecistitis aguda

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Profesor Honorario de Cirugía,
Universidad Nacional de Colombia.
Jefe Honorario, Departamento de Cirugía,
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a colecistitis aguda es una complicación


grave de la colelitiasis y también la más
frecuente. Es motivo común de consulta a los
Se estima que alrededor de 20% de los casos
de hospitalización por enfermedad litiásica
biliar son de colecistitis aguda. Por razón de
servicios de urgencias, especialmente por pa- la mayor longevidad de la población, se ha
cientes del género femenino y de edad mayor incrementado el número de colecistectomías
de 50 años, en quienes usualmente se en- de urgencia por colecistitis aguda.
cuentra comorbilidad asociada, como hiper-
tensión, obesidad o diabetes. En el estado La obstrucción del canal cístico por un cálcu-
postoperatorio o postraumático es relativa- lo impactado en la bolsa de Hartmann o la ero-
mente frecuente la aparición de una colecistitis sión y el edema de la mucosa del cístico cau-
aguda, que puede ser litiásica o, con menor sados por el paso de un cálculo son los fenó-
frecuencia, acalculosa. menos fundamentales que dan lugar a una
colecistitis aguda. La obstrucción del canal
La colecistitis aguda acalculosa o alitiásica se cístico resulta en distensión de la vesícula, la
presenta en pacientes en estado crítico por cual provoca interferencia con la irrigación
trauma mayor y otras causas, en pacientes sanguínea y el drenaje linfático, e infección
sometidos a prolongados regímenes de nutri- secundaria.
ción parenteral total prolongada, en algunos
casos de quimioterapia por vía de la arteria Los microorganismos más frecuentes en la bi-
hepática y en otras condiciones clínicas poco lis de la colecistitis aguda son entéricos, entre
frecuentes. ellos E coli, Klebsiella spp, Streptococcus fe-
calis, Clostridium welchii, Proteus spp, y Bac-
La colecistitis aguda puede ser de carácter le- teroides. Entre 15% y 30% de los pacientes
ve e involucionar en forma espontánea o pro- con colelitiasis presenta bilis infectada, pero
gresar hacia el empiema de la vesícula biliar, la infección de la bilis es casi universal en los
lo que en Colombia se conoce como “piocole- casos de colecistitis aguda, coledocolitiasis,
cisto”, y hasta la necrosis y gangrena con per- estenosis u obstrucción biliar no tumoral.
foración del órgano y peritonitis biliar, lo cual
se asocia con una elevada tasa de mortali- Cuando sólo ocurre la distensión aguda se
dad, del orden de 20%. produce el hidrops de la vesícula, que en nues-
tro medio se conoce como “hidrocolecisto”.

732
CAPÍTULO V: COLECISTITIS AGUDA

La evolución es variable, según persista o no amilasa sérica a niveles de ≥1.000 U/dL. La


la obstrucción por el cálculo impactado, la presencia de ictericia clínica y bioquímica pro-
edad y el estado circulatorio del paciente, el nunciadas debe hacer pensar en coledocoli-
grado de infección bacteriana secundaria y la tiasis asociada, y la hiperamilasemia, que se
coexistencia de otras enfermedades, especial- presenta en alrededor de 15% de los pacien-
mente diabetes mellitus. La gangrena y perfo- tes, puede también ser indicativa de pancrea-
ración pueden ocurrir en forma precoz, en el titis aguda. Hay que recordar que 30% de los
tercer día luego de la iniciación de los sínto- casos de pancreatitis aguda biliar se asocian
mas, cuando todavía no se han desarrollado con colecistitis aguda.
adherencias que más tarde crean una un ver-
dadero “sellamiento” que aísla a la vesícula En los pacientes de edad avanzada se oblite-
inflamada. En general la perforación se pre- ran o atenúan algunos de la manifestaciones
senta tardíamente, hacia la segunda sema- clínicas por razones orgánicas o por tratamien-
na. La tasa de perforación de una colecistitis tos para enfermedades concomitantes: es fre-
aguda es baja, apenas del orden de 1-2%. cuente observar ausencia de fiebre en las per-
sonas muy mayores, o en las que están to-
mando aspirina, esteroides o agentes anti-
PRESENTACIÓN CLÍNICA inflamatorios no esteroideos.
Y DIAGNÓSTICO
La ultranonografía (ecografía) es el método
El cuadro clínico es bastante característico: diagnóstico por excelencia y los hallazgos son
dolor abdominal en la región del hipocondrio típicos: vesícula biliar distendida, con paredes
derecho y/o el epigastrio, que puede ser del de grosor aumentado por la inflamación aguda
tipo de cólico intenso que no cede fácilmente de la pared, con cálculos o barro biliar en su
con terapia analgésica y que puede referirse interior. En la absoluta mayoría de los casos
a la región escapular derecha, náusea y vó- la ultrasonografía es el único examen necesa-
mito (en 60-70%), fiebre (38°-38,5°C) y, en rio para establecer el diagnóstico con un alto
algunos casos, alrededor del 10%, ictericia. grado de certeza.
Más de dos terceras partes de los pacientes
refieren cólico biliar previo. La palpación del La escanografía gamagráfica, HIDA, es bas-
abdomen revela dolor en la región subcostal tante específica en el diagnóstico de la cole-
derecha, donde se puede palpar una masa cistitis aguda, aunque ha perdido favoritismo
dolorosa que corresponde a la vesícula infla- frente a la ultrasonografía. Con este método
mada y distendida, más o menos en la mitad no se logra demostrar la presencia de cálcu-
de los pacientes, según el grado de obesidad los, pero cuando se visualiza la vesícula se
y la ubicación de la vesícula en profundidad puede excluir el diagnóstico de colecistitis agu-
en el lecho hepático. El signo de Murphy, que da. Sin embargo, en casos ocasionales de co-
es el intenso dolor que causa la palpación lecistitis acalculosa se visualiza la vesícula.
sobre el hipocondrio derecho, es patognomó-
nico, aunque no siempre se halla presente.
Es común una una leucocitosis de 12.000- TRATAMIENTO
15.000, Se registra elevación de la bilirrubina
a niveles del orden de 2-4 mg/dL en un 10% Establecido el diagnóstico de colecistitis agu-
de los pacientes, elevación leve de la fosfatasa da, se hospitaliza el paciente y se inicia trata-
alcalina y, en algunos casos, elevación de la miento con líquidos intravenosos, antibióticos

733
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

y analgésicos. En las horas siguientes se com- medad cardiaca o pulmonar, o en aquellos en


pletan los estudios necesarios para confirmar estado crítico por enfermedad grave asocia-
el diagnóstico y para determinar la presencia da, en quienes el riesgo de una colecistecto-
de enfermedades o de patología concomitan- mía resulta prohibitivo. También puede estar
tes. Si no se registra mejoría y el paciente es indicado en casos de empiema severo de la
de muy alto riesgo, se procede con una cole- vesícula biliar (“piocolecisto”), donde el seve-
cistostomía percutánea; si no es de alto riesgo, ro proceso inflamatorio puede hacer muy
se practica colecistectomía laparoscópica pre- dispendiosa y peligrosa la disección.
coz (tan pronto como sea posible, 24-48 ho-
ras), o tardía (4 a 6 semanas). La colecistecto-
mía tardía, o sea diferida (4-6 semanas), COLECISTITIS ENFISEMATOSA
“cuando se haya enfriado” el proceso agudo,
tiene desventajas reconocidas: posibilidad de Ocurre con una frecuencia baja, del orden de
un episodio recurrente de colecistitis aguda; 1-2% de los casos de colecistitis aguda, pero
mayores costos resultantes de dos hospitali- constituye una entidad muy grave y de rápida
zaciones; operación más difícil por los cam- progresión, que se acompaña de un cuadro
bios inflamatorios locales luego del ataque de agudo y tóxico, con fiebre y elevada leucocito-
colecistitis aguda. sis. La gangrena de la vesícula es común. Tie-
ne especial predilección por hombres diabéti-
Colecistectomía. El procedimiento de elec- cos mayores de 60 años.
ción es la colecistectomía laparoscópica,
hoy considerado como el “patrón oro” en el El hallazgo radiológico característico es la pre-
manejo quirúrgico de la enfermedad calculosa sencia de burbujas de gas indicativas de una
de la vesícula biliar. El uso racional de antibió- infección anaeróbica de la vía biliar, general-
ticos profilácticos ha logrado controlar bastan- mente por Clostridium perfringens y otros clos-
te bien el desarrollo de complicaciones sépti- tridios, pero también por E coli, Klebsiella o
cas postoperatorias. La combinación de ampi- estreptococos anerobios. El gas demarca los
cilina-sulbactam con gentamicina es eficaz bordes de la vesícula y es visible en las radio-
como profilaxis en la colecistectomía, así como grafías simples de abdomen. La TAC demues-
las cefalosporinas de segunda generación. tra con alto grado de certeza la presencia del
gas en una vesícula con severa inflamación
La colecistectomía laparoscópica precoz se aguda.
realiza con altos grados de seguridad: morta-
lidad de menos de 0,2% y morbilidad de me- El tratamiento único es la colecistectomía de
nos de 5%. La tasa de conversión a cirugía emergencia, con adecuado cubrimiento anti-
abierta es más alta que en la colecistectomía biótico, pero en algunos casos de alto riesgo
laparoscópica electiva. es conveniente optar por la colecistostomía.

Colecistostomía. En ciertas circunstancias de


muy alto riesgo está indicada la colecistosto- COLECISTITIS ACALCULOSA
mía percutánea guiada por imágenes. El pro-
cedimiento también puede ser practicado en Se define como una inflamación aguda de la
forma abierta y, en algunos casos, con anes- vesícula biliar en ausencia de cálculos y re-
tesia local. Es de gran utilidad en pacientes presenta aproximadamente 4-8% de los ca-
de edad muy avanzada o con severa enfer- sos de colecistitis aguda. En contraste con la

734
CAPÍTULO V: COLECISTITIS AGUDA

colecistitis aguda calculosa que tiene predi- ferido es la colecistectomía abierta una vez
lección por el sexo femenino, ésta lo tiene por establecida la presencia de cambios
el masculino, con una relación de 1,5:1. gangrenosos.

Se desarrolla en pacientes en estado crítico


por trauma severo, quemaduras extensas o LECTURAS RECOMENDADAS
complicaciones postoperatorias de larga evo-
lución y en aquellos que han sido sometidos 1. Assalia A, Kopelman D, Hashmonai M. Emergency
a prolongados regímenes de nutrición minilaparotomy cholecystectomy for acute chole-
cystitis: prospective randomized trial—implications
parenteral total.
for the laparoscopic era. World J Surg 1997;
21:534-539.
Su etiología es variada y realmente multifac- 2. Bingener J, Richards ML, Schwesinger WH, et al.
torial, probablemente asociada a estasis de Laparoscopic cholecystectomy for elderly patients:
la bilis con formación de barro biliar y coloniza- gold standard for golden years? Arch Surg 2003;
ción bacteriana secundaria en pacientes en 138:531-555.
ayuno oral o enteral. Algunos casos, muy ra- 3. Hsieh CH. Early minilaparoscopic cholecystectomy
in patients with acute cholecystitis. Am J Surg
ros, se deben obstrucción del canal cístico por
2003; 185:344-348.
un neoplasma maligno, por oclusión de la ar- 4. Kiviluoto T, Siren J, Luukkonen P, et al. Rando-
teria cística o por infección bacteriana primaria mised trial of laparoscopic versus open chole-
por E. coli, clostridios o Salmonella typhi. La cystectomy for acute and gangrenous cholecystitis.
gangrena y la perforación son relativamente Lancet 1998 31; 351:321-325.
frecuentes, fenómeno que diferencia a la cole- 5. Lai PB, Kwong KH, Leung KL, Kwok SP, et al.
Randomized trial of early versus delayed laparos-
cistitis aguda acalculosa de la colecistitis agu-
copic cholecystectomy for acute cholecystitis. Br
da litiásica, y que explica su mayor tasa de J Surg 1998; 85:764-777.
mortalidad. 6. Nahrwold DL. Acute cholecystitis. En: Textbook of
Surgery. Editado por DC Sabiston Jr. Fifteenth
El diagnóstico se hace en la misma forma que edition. WB Saunders Company. Philadelphia,
en la colecistitis aguda litíasica, por ultrasono- 1997.
grafía y/o escintigrafía HIDA. 7. Patiño JF. Colecistitis aguda. En: Lecciones de
Cirugía. Por JF Patiño. Editorial Médica Paname-
ricana. Buenos Aires-Bogotá, 2001.
La colecistectomía laparoscópica presenta 8. Schwesinger WH, Sirinek KR, Strodel WE.
problemas técnicos por el estado inflamatorio Laparoscopic cholecystectomy for biliary tract
local, con edema y fibrosis que borran las es- emergencies: state of the art. World J Surg 1999;
tructuras anatómicas. Por ello el abordaje pre- 23:334-342.

735
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Colelitiasis

Roosvelt Fajardo, MD
Sección de Cirugía General
Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a patología del árbol biliar se puede dividir


en:
La colelitiasis es más frecuente en las muje-
res en edad fértil, en una proporción mujer:
hombre de 4:1. Asimismo, la obesidad, la
• enfermedad litiásica; hiperlipidemia, la cirrosis, la anemia hemolítica
• enfermedad neoplásica: crónica, la edad avanzada, la pérdida rápida
• enfermedades inflamatorias raras; de peso y el uso prolongado de anticoncepti-
• anomalías anatómicas (colangitis esclero- vos orales (estrógenos) son factores de riesgo
sante y quistes de colédoco). de desarrollar colelitiasis. Existen factores étni-
cos relacionados que explican por qué la cole-
En nuestro medio, al igual que en el resto del litiasis es más frecuente en indígenas de la
mundo, la patología litiásica es la más frecuen- tribu Pima norteamericana, así como en las
te en el árbol biliar, a lo cual se ha referido poblaciones de México y de Estados Unidos.
Patiño y constituye la base de este capítulo. La prevalencia de esta entidad y la de sus
La colelitiasis es su forma más simple, y se complicaciones es mucho mayor en personas
define como la presencia de cálculos en el in- de edad avanzada.
terior de la vesícula biliar. Con el creciente uso
de la ecografía abdominal se diagnostica un Desde el punto de vista clínico, la colelitiasis
alto número de personas con cálculos, mu- puede ser asintomática o manifestarse con
chos de ellos asintomáticos. Entre 10% y 15% complicaciones tales como colangitis o pan-
de la población total de los Estados Unidos creatitis biliar, que conllevan una alta mortali-
se encuentra afectada por esta patología, lo dad. En ciertas regiones del mundo, como
cual corresponde a unos 20 millones de per- Chile, Bolivia y Nariño (Colombia), la colelitia-
sonas y a un millón de casos nuevos por año; sis se asocia con una elevada frecuencia de
en ese país se practican unas 750.000 cáncer de la vesícula biliar.
colecistectomías anualmente. R.C. Botero ha
encontrado una incidencia de cálculos asinto- Con la edad aumenta la incidencia de colelitia-
máticos de 8,6% en chequeos médicos de ru- sis, y también la de complicaciones tales como
tina en hombres sanos en el Hospital Univer- colecistitis aguda, coledocolitiasis con colan-
sitario de la Fundación Santa Fe de Bogotá. gitis y/u obstrucción biliar, pancreatitis, fístula
colecistoentérica e íleo biliar, y carcinoma de

736
CAPÍTULO VI: COLELITIASIS

la vesícula. Estas complicaciones se acom- rrollo de complicaciones que pueden llevar a


pañan de considerable morbilidad y mortali- una operación de urgencia, la cual sería más
dad. El carcinoma de la vesícula es una enti- compleja y tendría mayor morbilidad y morta-
dad extremadamente agresiva, que exhibe lidad que una colecistectomía electiva o “profi-
muy bajas tasas de supervivencia. láctica”. Esto, sin embargo, es motivo de con-
troversia, y muchos autores se manifiestan en
La incidencia de coledocolitiasis en el momen- contra de la colecistectomía profiláctica en la
to de la colecistectomía aumenta en propor- colelitiasis asintomática.
ción directa con la edad (Herman 1989):
Otro de los riesgos es la posibilidad de desa-
31-40 años 9%
rrollar carcinoma de la vesícula biliar. Se sabe
41-50 años 9%
que 70-90% de los pacientes con cáncer de
51-60 años 14%
la vesícula presentan colelitiasis, y también
61-70 años 31%
que 0,4% de los pacientes con diagnóstico de
71-80 años 48%
colelitiasis, desarrollan carcinoma vesicular.
81-90 años 96%
Tales cifras son mucho más altas en Chile,
Bolivia y Nariño (Colombia). Este porcentaje
aumenta considerablemente cuando existe un
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
cálculo único >3 cm y todavía más cuando se
La forma de presentación de la colelitiasis de- asocia con una vesícula en porcelana, condi-
pende principalmente de la localización ana- ción en la cual el porcentaje aumenta osten-
tómica en que se encuentren los cálculos. siblemente (25-60%).

Alrededor de 50% de los pacientes con coleli- Existen pacientes que consideramos de alto
tiasis son asintomáticos y en ellos el diagnósti- riesgo y que, por lo tanto, para ellos se plan-
co es incidental. Aunque estos pacientes no tea un esquema terapéutico diferente, funda-
presentan, y nunca han presentado síntomas mentalmente la consideración de colecistec-
correspondientes a su enfermedad biliar, es tomía laparoscópica profiláctica. Estos son:
importante identificarlos para planear un es- • Pacientes con enfermedades concomitan-
quema terapéutico racional. El riesgo de desa- tes que en caso de presentar alguna com-
rrollar alguna complicación de la enfermedad plicación secundaria a la colelitiasis pue-
es de 0,33% por año, para un riesgo acumu- dan tener alta morbilidad y mortalidad a pe-
lativo a los 20 años de 5,8%. En los monumen- sar de un tratamiento adecuado, especial-
tales estudios realizados por el grupo de Frank mente los pacientes con diabetes mellitus.
Glenn (Glenn 1983; McSherry et al 1989) en • Pacientes jóvenes con larga expectativa de
el New York Hospital-Cornell Medical Center, vida, que tienen una mayor probabilidad de
y por otros autores norteamericanos y desarrollar complicaciones con el paso de
europeos, se estableció que con el avance de los años.
la edad los pacientes con colelitiasis asinto- • Pacientes con cambios anatómicos de la
mática se convierten en pacientes sintomáti- vesícula, como calcificaciones (vesícula en
cos, si el seguimiento se hace a largo plazo, porcelana), que exhiben un mayor riesgo
en una proporción de 30% a 50%. Ello signifi- de desarrollar cáncer de vesícula.
ca que la presencia de cálculos en la vesícula • Pacientes que por razones étnicas y geo-
biliar de por sí constituye indicación para cole- gráficas tienen una mayor predisposición
cistecomía, con el objeto de prevenir el desa- a presentar cáncer de vesícula.

737
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Pacientes que presentan cálculos grandes anaerobios (E. coli, K. pneumoniae, Clostri-
(>2 cm), cálculos muy pequeños (<3 mm), dium sp).
cálculos calcificados o radiopacos o un cál-
culo enclavado en el cístico. Otro grupo de pacientes presenta cuadros
recidivantes de cólico por obstrucción parcial
Los pacientes con colelitiasis que sean asinto- o temporal del conducto cístico, lo cual signi-
máticos y no cumplan con estos criterios se fica inflamación recurrente que lleva a fibrosis
consideran de bajo riesgo. de la vesícula y colecistitis crónica.

El otro 50% de los pacientes con colelitiasis Existen otras complicaciones graves secun-
son o han sido en algún momento sintomáti- darias a la colelitiasis. La coledocolitiasis ocu-
cos. De éstos, el 75% presenta un cuadro de rre globalmente en el 15% de los pacientes,
cólico biliar, el cual se caracteriza por dolor pero aumenta con la edad como se ha seña-
abdominal de inicio súbito, generalmente pos- lado anteriormente. Sus manifestaciones clí-
terior a una comida rica en grasa, que se locali- nicas son dolor de tipo cólico, producido por
za en el hemiabdomen superior, principalmen- contracciones espasmódicas del colédoco,
te sobre el hipocondrio derecho. Puede o no ictericia secundaria a la obstrucción, heces
estar acompañado de náuseas y vómito. En acólicas y orina colúrica. Cuando el diagnós-
el examen físico hay leve dolor abdominal a tico es tardío, la estasis de bilis en el colédoco
la palpación sin signo de Murphy (la inspira- facilita la colonización bacteriana, producien-
ción profunda produce dolor cuando el exa- do una colangitis cuyo pilar diagnóstico es la
minador presiona por debajo y hacia arriba del “Triada de Charcot”: fiebre, dolor e ictericia.
arco costal derecho) ni signos de irritación peri-
toneal. Es característico que el cuadro ceda La migración de cálculos del colédoco al duo-
con la aplicación de analgésicos endoveno- deno puede causar una pancreatitis aguda.
sos, puesto que no hay obstrucción del cístico. La litiasis biliar es la causa más frecuente de
Un paciente sólo debe ser considerado sinto- pancreatitis aguda en nuestro medio, algo más
mático cuando presenta cólico biliar o los sín- de 60% de los casos. El principal método diag-
tomas de las complicaciones de la colelitiasis. nóstico es la determinación de los niveles de
La flatulencia, la dispepsia y el malestar diges- amilasa en el plasma.
tivo general (“todo me cae mal”) no son sínto-
mas atribuibles a la colelitiais.
AYUDAS DIAGNÓSTICAS
Cuando el cálculo migra y obstruye la luz del
conducto cístico, el cuadro evoluciona hacia El ultrasonido (US) de hígado y vías biliares
una colecistitis aguda, lo cual representa un es el examen de elección en el diagnóstico
5% de los pacientes que son llevados a cole- de colelitiasis; posee una certeza diagnóstica
cistectomía (Karam & Roslyn 1997). La cole- superior a 95%, con sensibilidad y especifici-
cistits aguda cursa con fiebre y persistencia dad que superan esta cifra.
del dolor. Los cambios inflamatorios en la ve-
sícula pueden evolucionar a gangrena y per- El hemograma permite establecer la existen-
foración, con peritonitis biliar secundaria, en cia de un cuadro inflamatorio, mediante la de-
la cual la bilis aparece infectada hasta en 50- mostración de leucocitosis, neutrofilia o bande-
75% de los casos. Los gérmenes más común- mia. Los pacientes asintomáticos, los que tie-
mente aislados son los Gram negativos y los nen colecistitis crónica y los pacientes con

738
CAPÍTULO VI: COLELITIASIS

cólico biliar usualmente presentan un hemo- en la coledocolitiasis sintomática también pue-


grama dentro de límites normales, en contras- de haber elevación, aunque modesta, de la
te con los que sufren colecistitis aguda sin re- amilasa sérica. Otros hallazgos en la pancrea-
percusiones sistémicas, que suelen presen- titis aguda dependen de la presencia o no del
tar leucocitosis en un rango de 12.000 a cálculo en el colédoco; sin embargo, los nive-
15.000 por mm3; cuando la leucocitosis supe- les de fosfatasa alcalina y de GGTP general-
ra los 20.000 debe sospecharse colecistitis mente se encuentran elevados, ya sea por la
gangrenosa y perforación con peritonitis o co- presencia de microcálculos o por los cambios
langitis. En los pacientes con pancreatitis y/o histológicos que sobre la papila produce el
coledocolitiasis suele haber un aumento de paso de cálculos.
los leucocitos, cuya magnitud depende del es-
tado del paciente y del compromiso sistémico. Cuando la ecografía no es conclusiva para el
diagnóstico de colecistitis aguda, se utiliza la
En los pacientes con colelitiasis es pertinente gamagrafía con HIDA (hepato-imido-diacetic-
ordenar un perfil hepático completo, incluyen- acid), método que demuestra la exclusión de
do niveles séricos de fosfatasa alcalina, gama- la vesícula como hallazgo característico.
glutamil transpeptidasa (GGTP), transamina-
sas, bilirrubinas y amilasa. Estos niveles apa-
recen normales en los casos asintomáticos, TRATAMIENTO
con cólico biliar y con colecistitis crónica, pero
en la colecistitis aguda puede verse elevación Reconociendo que son la alterada función de
de las bilirrubinas a expensas de la directa, la vesícula biliar y las características litogéni-
por el fenómeno obstructivo de la inflamación cas de la bilis los mecanismos fisiopatológicos
de la vesícula sobre el conducto hepático co- involucrados en la formación de cálculos, el
mún, lo cual ocurre hasta en un 10% de los tratamiento curativo de los pacientes con cole-
casos. En pacientes con cuadro de coledocoli- litiasis debe ser la colecistectomía. La cole-
tiasis, la fosfatasa alcalina y la GGTP son los cistectomía, y ahora por el método minima-
exámenes de laboratorio más sensibles y mente invasor, es el patrón oro en el manejo
específicos en el diagnóstico de esta entidad; de la colelitiasis.
las bilirrubinas están aumentadas a expensas
de la directa y el nivel de elevación depende La aparición de la cirugía minimamente inva-
del grado de obstrucción. Cuando hay colangi- sora (colecistectomía laparoscópica) ha au-
tis secundaria a la obstrucción del colédoco, mentado en un 30% el número de colecistecto-
puede presentarse un aumento importante de mías que se realizan anualmente en los Esta-
las transaminasas, aunque casi nunca alcan- dos Unidos. Es un procedimiento que acusa
zan los niveles que se observan en procesos una tasa de mortalidad inferior a 0,16% y que
hepáticos propios (como las hepatitis virales). disminuye de manera significativa los costos
Los pacientes con pancreatitis tienen como hospitalarios y sociales (laborales, familiares).
hallazgo fundamental la elevación de la amila- Su complicación más preocupante es la lesión
sa sérica al inicio del cuadro, y es característi- iatrogénica de la vía biliar, la cual, según al-
co de la pancreatitis biliar que los niveles se gunos autores, se puede disminuir con la rea-
encuentren muy altos, en ocasiones por enci- lización de colangiografía intraoperatoria
ma de 4.000 UI/L, lo cual no se observa en la (Flum et al 2003). En nuestro servicio es un
pancreatitis de etiología alcohólica. Debe te- procedimiento que sólo se practica en casos
nerse en cuenta que en la colecistitis aguda y seleccionados.

739
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Los pacientes con diagnóstico de colelitiasis drenados mediante colecistostomía percutá-


asintomática clasificados como de bajo riesgo nea y más adelante, una vez resuelto el epi-
y cuyos hallazgos de laboratorio sean negati- sodio agudo, se considera la posibilidad de
vos, pueden ser mantenidos bajo observación. colecistectomía laparoscópica durante la mis-
Pero en aquellos con colelitiasis asintomática ma hospitalización o diferida.
clasificados como de alto riesgo, se debe rea-
lizar una colecistectomía laparoscópica elec- En pacientes con un cuadro compatible con
tiva, con miras a evitar complicaciones futuras, coledocolitiasis se debe practicar una colan-
operaciones de urgencia en edades avanza- giopancreatografía retrógrada endoscópica
das o en pacientes con enfermedades conco- (CPRE), cuya sensibilidad y especificidad es
mitantes y a evitar la aparición del muy malig- alta. Además, tiene la ventaja de ser una op-
no carcinoma de la vesícula biliar (Patiño ción terapéutica al practicarse papilotomía
2001; Patiño y Quintero 1998). endoscópica. En los casos en que la CPRE
es diagnóstica y terapéutica, se procede con
Los pacientes con colecistitis crónica, cólico la colecistectomía laparoscópica durante la
biliar y colecistitis aguda también deben ser misma hospitalización. El mismo aproche se
llevados a colecistectomía. La operación está utiliza en la pancreatitis aguda, aunque el ma-
indicada en la colecistitis crónica, aun si es nejo específico de esta entidad merece una
asintomática, por el riesgo de complicaciones revisión independiente, la cual aparece en la
y de cáncer de la vesícula. Los pacientes con guía Pancreatitis Aguda. Los pacientes con
cólico o con colecistitis aguda deben ser hos- coledocolitiasis o pancreatitis aguda someti-
pitalizados para hidratación con soluciones dos a CPRE sin buen resultado terapéutico
cristaloides intravenosas, suspensión de la vía deben ser llevados a colecistectomía laparos-
oral, manejo del dolor con analgésicos endo- cópica con colangiografía introperatoria y con-
venosos (como la buscapina, de efecto anti- ducta según hallazgos y/o a colecistectomía
espasmódico) y colecistectomía laparoscópica abierta con colangiografía intraoperatoria y
durante la misma hospitalización. Aquellos con exploración de vía biliar, según hallazgos.
colecistitis aguda deben recibir antibióticos
endovenosos una vez confirmado el diagnós-
tico; los antibióticos se inician con esquemas LECTURAS RECOMENDADAS
terapéuticos, tales como ampicilina-sulbac-
1. Botero RC, Abello H. Frecuencia de los cálculos
tam, cefoperazona o cefoperazona/sulbactam, vesiculares asintomáticos en un programa de che-
que además de proveer un excelente cubri- queos médicos (Resumen). Acta Méd Colomb
miento contra los gérmenes más comunes, se 1990; 15:241.
caracterizan por una elevada excreción biliar. 2. Chousleb A, Schuchleib S, Cervantes J. Indica-
ciones de la colecistectomía laparoscópica. En:
Los casos de colecistitis aguda deben ser cla- Cirugía Laparoscópica y Toracoscópica. Editado
sificados según el riesgo anestésico según la por J Cervantes, JF Patiño. Interamericana Mc
Graw-Hill Inc. México, 1997.
clasificación ASA (American Society of
3. Feldman MG, Russell JC, Lynch JT, et al.
Anesthesiology): los clasificados como ASA 1, Comparison of mortality rates for open and closed
2 y 3 deben ser llevados a colecistectomía la- cholecystectomy in the elderly: Connecticut
paroscópica una vez se haya controlado el statewide survey. J Laparoendosc Surg 1994;
cuadro agudo, durante la misma hospitaliza- 4:165-172.
ción. Los clasificados como ASA 4 ó 5, cuyo 4. Flum DR, Dellinger EP, Cheadle A, et al.
riesgo anestésico es elevado, deben ser Intraoprative cholangiography and risk of common

740
CAPÍTULO VI: COLELITIASIS

bile duct injury during cholecystectomy. JAMA SR Wilson, JW Charboneau. Second Edition.
2003; 289:1639-1644. Mosby. St. Louis, 1998.
3. Glenn F. Silent or asymptomatic gallstones. En: 8. Lo CM, Liu CL, Fan ST, Lai EC, et al. Prospective
Controversies in Surgery II. Editado por JP Dela- randomized study of early versus delayed
ney and RL Varco. WB Saunders Co. Philadelphia, laparoscopic cholecystectomy for acute cholecys-
1983. titis. Ann Surg 1998; 227:461-467.
4. Hermann RE. The spectrum of biliary stone disea- 9. McSherry CK. Cholecystectomy: the gold stan-
se. Am J Surg 1989; 158:171-173. dard. Am J Surg 1989; 158:174-178.
5. Karam J, Roslyn JJ. Cholelithiasis and cholecys- 10. JF Patiño. Colecistectomía en el paciente asinto-
tectomy. En: Maingot’s Abdominal Operations. mático. En: Lecciones de Cirugía. Por JF Patiño.
Editado por MJ Zinner, SI Schwartz, H Ellis. Tenth Editorial Médica Panamericana. Buenos Aires-Bo-
Edition. Appleton & Lange, Stamford,1997. gotá, 2001.
6. Lai PB, Kwong KH, Leung KL, Kwok SP, Chan AC, 11. Patiño JF, Quintero GA: Asymptomatic cholelithiasis
Chung SC, Lau WY. Randomized trial of early ver- revisited. World J Surg 1998; 22:1119-1124.
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7. Laing FC. The gallbladder and bile ducts. En: SI Schwartz. Quinta edición. Interamericana Mc
Diagnostic Ultrasound. Editadp por CM Rumack, Graw-Hill. México, 1991.

741
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VII

Hemorragia digestiva alta

Jaime Solano Mariño, MD


Jefe de Endoscopia Digestiva,
Departamento de Cirugía.
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a hemorragia digestiva alta es la pérdida


de sangre que tiene origen en los segmen-
tos del tracto gastrointestinal proximales al li-
a los servicios de urgencias con esta compli-
cación; mientras en 1947 apenas el 2% de
los pacientes con hemorragia digestiva alta
gamento de Treitz. aguda sobrepasaba los 70 años, actualmente
la cuarta parte corresponde a personas mayo-
La magnitud y severidad de la pérdida sanguí- res de 80 años. La edad guarda una estrecha
nea oscila desde un grado bajo e intermitente relación con la incidencia de enfermedades
que requiere pruebas para detectar sangre crónicas asociadas, que inevitablemente
oculta en las heces y que sólo produce anemia incrementan la mortalidad.
ferropénica, hasta la hemorragia aguda y ma-
siva que se presenta con hematemesis y La edad, la comorbilidad, el shock, la concen-
shock hipovolémico y que pone en peligro la tración de la hemoglobina al ingreso, el tama-
vida del paciente, cuadro que hace perentoria ño de la úlcera causante del sangrado, los es-
una evaluación clínica rápida pero sistemática tigmas mayores de hemorragia reciente, los
y la instauración de tratamiento enérgico y bien requerimientos de transfusiones sanguíneas,
conducido orientado a recuperar el estado he- han sido identificados como los principales fac-
modinámico. El paciente con hemorragia del tores de predicción de riesgo de ulterior resan-
tracto digestivo alto requiere manejo interdisci- grado y de mortalidad.
plinario por el internista, el gastroenterólogo y
el cirujano que atienden los servicios de urgen-
cias, con apoyo del endoscopista y del radió- DEFINICIONES
logo intervencionista.
Hemorragia GastroIntestinal Masiva: es
A pesar de los avances de la tecnología y de aquella que ocurre en forma súbita, con pér-
la farmacología, la tasa de mortalidad global dida mayor de un litro de sangre o en suficiente
por hemorragia digestiva alta no ha mejorado cantidad para producir hipovolemia.
en las últimas cinco décadas, y se mantiene
por encima de 10 %. Esta desalentadora rea- Hipovolemia: significa un déficit del volumen
lidad se explica por el aumento significativo circulatorio que se manifiesta por taquicardia,
en la edad de los pacientes que hoy ingresan hipotensión, presión venosa central baja y

742
CAPÍTULO VII: HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA

cambios posturales en la presión arterial y el Angiomas 6


pulso. Síndrome de Mallory Weiss 6
Erosiones 4
Hemorragia GastroIntestinal Baja: es aque- Tumores 4
lla que se origina en un lugar distal al liga- Úlcera de Dieulafoy 1
mento de Treitz, cuyo manejo se describe en Otras 10
otra guía de esta serie.
La úlcera péptica sigue siendo la causa más
Hematemesis: vómito de sangre roja, viva. común de hemorragia no varicosa del tracto
digestivo superior, y constituye más de la mi-
Melanemesis: vómito de sangre negra, alte- tad de los casos.
rada, con aspecto de “cuncho de café”.

Melena: excreción de sangre negra por el DIAGNÓSTICO


recto.
La anamnesis es de especial valor en la de-
Hematoquezia: excreción de sangre roja, terminación de la causa, y debe incluir pregun-
viva, por el recto. tas sobre episodios anteriores de hemorragia
digestiva, diagnóstico previo de úlcera péptica,
Síndrome de Mallory-Weiss: sangrado intra- de várices, pólipos o enfermedad hepática;
luminal que resulta de una laceración longitu- también sobre el uso de medicamentos como
dinal de la mucosa y la submucosa del estó- aspirina, anti-inflamatorios no esteroideos, te-
mago y de la unión gastroesofágica, y rara rapia anticoagulante y abuso de alcohol. La
vez del esófago distal, usualmente por disten- aspirina y, especialmente los anti-inflamatorios
sión forzada por vómito o náusea. no esteroideos, agentes notoriamente ulcero-
génicos, son frecuentemente prescritos en
El color de la sangre excretada por vía rectal personas de edad avanzada que padecen ar-
no es una clave definitiva para la identificación tritis y enfermedades degenerativas.
del lugar de origen de la hemorragia; es así
como, el efecto catártico de una hemorragia El examen físico debe buscar estigmas de
masiva por una ulcera duodenal puede pro- enfermedad hepática crónica (ictericia, telan-
ducir rapidez del tránsito intestinal y presen- giectasias, ascitis, esplenomegalia). El tacto
tar hematoquezia con salida de coágulos fres- rectal y el aspirado del estómago al pasar una
cos por el recto, siendo su origen en el tracto sonda nasogástrica pueden ser altamente
digestivo superior. sugestivos del origen de la hemorragia.

Los exámenes de laboratorio deben incluir


ETIOLOGÍA hemograma, hemoclasificasión, perfil hepáti-
co, pruebas de coagulación, creatinina sérica,
Las principales causas de hemorragia diges- proteinemia y albuminemia. El seguimiento se
tiva alta severa son: hace mediante control del hematocrito, tenien-
do en mente que las primeras cifras pueden
Causa % subestimar la severidad de la pérdida sanguí-
Úlcera péptica 55 nea por el fenómeno de hemoconcentración.
Várices gastroesofágicas 14 El electrocardiograma es indispensable en

743
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

pacientes con factores de riesgo cardio- cremento en 10 latidos por minuto en la fre-
vascular. cuencia cardiaca indican una pérdida de
1.000-1.500 mL de sangre (20-30% del volu-
Las radiografías de vías digestivas altas con men sanguíneo). Si hay hipotensión o taqui-
bario se mencionan solamente para censurar- cardia en reposo y en decúbito (FC >PA sistó-
las, porque además de baja sensibilidad y es- lica), no conviene ejecutar maniobras ortostá-
pecificidad diagnóstica, inhabilitan por varios ticas. En este caso se puede asumir una pér-
días la utilización de los demás métodos diag- dida de 1.500-2.000 mL de sangre (30%-40%
nósticos y terapéuticos, como la endoscopia, del volumen sanguíneo).
la radiología intervencionista y la gamagrafía.
Se deben registrar signos de vasoconstricción
Es muy importante diferenciar entre la hemo-
periférica como palidez y sudoración, asegurar
rragia crónica que produce intensa palidez mu-
un adecuado volumen urinario horario (1 mL/
cocutánea por anemia ferropénica microcítica
kg/min), vigilar el estado mental. La vía respi-
e hipocrómica, pero sin repercusión hemodi-
ratoria debe permanecer permeable, para lo
námica significativa, y la pérdida aguda de
cual es conveniente aspirar secreciones y
sangre que conduce rápidamente a hipoten-
sangre.
sión, taquicardia y shock hipovolémico. Son
dos situaciones diferentes en cuanto a los
ESTABILIZACIÓN HEMODINÁMICA
enfoques diagnósticos y terapéuticos.
Y RESPIRATORIA

MANEJO INICIAL 1. Se deben colocar una o dos vías intrave-


nosas de gran calibre en venas periféricas
• Oxígeno por vía nasal, especialmente en mayores. El catéter debe ser calibre 16 (18
pacientes de edad avanzada o con altera- en pacientes estables).
ciones cardio-respiratorias. 2. Es pertinenente la colocación de un caté-
• Colocación de un tubo nasogástrico para ter venoso central para monitoría de la pre-
lavado gástrico con agua o solución salina sión venosa por disección o punción veno-
a temperatura ambiente; la intubación es sa periférica (la punción subclavia no debe
muy útil para descomprimir el estómago y ser realizada en pacientes hipovolémicos).
determinar si la hemorragia continúa, pero 3. En pacientes inestables y con historia de
no tiene efectos hemostásicos. También enfermedad cardiaca conviene colocar un
sirve para limpiar el tracto gastrointestinal catéter de Swan-Ganz.
superior en preparación para la endosco- 4. De inmediato se debe iniciar la resucitación
pia. La ausencia de contenido hemático en mediante restauración del volumen con lac-
el lavado gástrico no descarta una hemo- tato de Ringer o con solución salina normal.
rragia con origen distal al píloro (±25% de 5. Se debe iniciar transfusión de sangre total
las úlceras duodenales exhiben aspirado o de concentrado de glóbulos rojos tan
gástrico libre de sangre). pronto como sea posible; esta es una de
las pocas situaciones clínicas en las cua-
VALORACIÓN DEL ESTADO CIRCULATORIO les hay indicación para el uso de sangre
Y RESPIRATORIO total. Cada unidad de sangre total debe pro-
ducir un aumento de 3% en el hematocrito;
Cambios ortostáticos: el descenso de 10 si ello no ocurre, debe sospecharse que la
mmHg en la presión arterial sistólica o el in- hemorragia no ha sido controlada.

744
CAPÍTULO VII: HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA

6. Se debe asegurar la disponibilidad de sufi- hora. Similar efecto inhibidor se obtiene con
ciente sangre para transfusiones la ranitidina en dosis de 50 mg IV cada 6-8
adicionales. horas o a una rata de infusion de 12,5 mg /
hora después del bolo inicial.
En resumen, se deben tener presentes estos
principios básicos y guiarse por los siguien- La administración de vasopresina (pitresina)
tes pasos: es una medida terapéutica inicial en prepara-
ción para la ligadura endoscópica de várices
• Reanimación y estabilización hemodiná- esofágicas. Tiene menor índice de éxito en pa-
mica rápida. cientes con úlcera péptica, gastritis erosiva y
• Determinación del comienzo y magnitud de síndrome de Mallory-Weiss. Se administra en
la hemorragia. bolos IV de 20 U disueltas en 200 mL de solu-
• Localización del sitio de la hemorragia. ción salina durante un periodo de 20 minutos,
• Determinación de la causa más probable. con intervalos de 30 minutos, por tres o cuatro
• Preparación para la endoscopia digestiva dosis, y luego a intervalos de tres horas si la
alta. hemorragia no cesa. También puede adminis-
• Endoscopia diagnóstica y terapéutica. trarse en infusión continua, a una rata de 0,4-
• Radiología diagnóstica y terapéutica. 0,6 U/minuto. La adición de nitroglicerina incre-
• Tratamiento del resangrado. menta el valor terapéutico de la vasopresina
y disminuye sus efectos secundarios. La pitre-
sina representa una medida terapéutica pa-
TERAPIA ESPECÍFICA sajera, pues sólo permite un control temporal
del sangrado.
El uso de medicamentos para detener la he-
morragia activa y prevenir el resangrado se La somatostatina y su análogo, el octreótido,
basa en dos principios: ejercen dos acciones que son muy valiosas
en el manejo de la hemorragia ulcerosa:
a) Mejorar la estabilidad del coágulo al dismi-
nuir el efecto fibrinolitico del medio ácido. a. Inhibición de la secreción de ácido.
b) Reducir el flujo arterial por la acción de b. Reducción del flujo sanguíneo esplácnico.
agentes como la vasopresina, la somatos-
tatina y el octreótido. Se administra un bolo intravenoso de 50 micro-
gramos/hora, seguido por una infusión de 50
Las drogas supresoras de ácido (antago- microgramos/hora, durante 72 horas.
nistas de los receptores H2 e inhibidores de
bomba protones) no están indicadas cuando
se encuentran signos de sangrado activo en TERAPIA ENDOSCÓPICA
la endoscopia. Su uso está justificado en los
pacientes con hemorragia ulcerosa en quienes Para realizar la endoscopia, el paciente debe
se busca iniciar en forma precoz el proceso encontrarse estable desde el punto de vista
de cicatrización y prevenir recurrencias, aun- hemodinámico. La endoscopia es una inter-
que no se ha demostrado una acción definida vención que produce hipoxemia y vómito, aún
sobre la detención del sangrado activo. Se más si se realiza bajo sedación. Por ello, ante
administran 40 mg de omeprazol IV iniciales, el riesgo de broncoaspiración, se debe trasla-
en bolo, seguidos de una infusión de 8 mg/ dar el paciente a la unidad de cuidado inten-

745
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sivo o a salas de cirugía para realizar el pro- grado, disminuir los volúmenes de transfusio-
cedimiento con la asistencia de un anestesió- nes, limitar la necesidad de cirugía y ha baja-
logo, quien debe tomar las precauciones per- do la mortalidad hospitalaria.
tinentes, asumiendo que el estómago puede
estar pleno de sangre o de alimentos. La sonda caliente (“Heater Probe”) actúa
transmitiendo una cantidad de energía pre-se-
Los métodos para detener la hemorragia ulce- leccionada (generalmente 20 vatios) al sitio
rosas activa se pueden clasificar en tres grupos: sangrante a través de un catéter con punta
a. Terapia de inyección. de teflón. Permite utilizar simultáneamente un
b. Métodos térmicos. chorro de agua para limpiar la base de la ulce-
c. Hemoclips. ra y visualizar con exactitud el sitio sangrante.

TERAPIA DE INYECCIÓN La coagulación con argón plasma se basa en


el efecto térmico que produce un chorro del
La inyección de sustancias para controlar la gas argón sobre la superficie de la mucosa.
hemorragia y prevenir el resangrado es un mé- Resulta particularmente aplicable en el ma-
todo simple, fácil, barato, disponible, que ha nejo de la hemorragia debida a malformacio-
demostrado su eficacia durante más de 20 nes vasculares como la ectasia vascular an-
años. tral, las angiodisplasias, y también en la gas-
tritis erosiva.
La sustancia de más amplia utilización ha sido
la adrenalina en dilución 1:10.000. General- En el manejo de la hemorragia arterial ulcero-
mente 3-5 mL son suficientes, y excepcional- sa son superiores los métodos de contacto
mente se requieren cantidades del orden de directo como la electrocoagulación bipolar
8-10 mL. No se ha observado que la absor- (BICAP) basada en la transmisión de energía
ción de la adrenalina resulte en aumento en eléctrica entre dos electrodos adyacentes. Ha
el número de eventos isquémicos cardiovas- demostrado ser superior, en cuanto eficacia y
culares. menor riesgo de perforación, a la electroco-
agulación monopolar con corriente diatérmica;
La adrenalina se combina con un agente sin embargo, esta última es la que se encuen-
esclerosante para producir sellamiento perma- tra disponible en la mayoría de los servicios
nente del defecto arterial. Todos los estudios de endoscopia en nuestro país.
han mostrado disminución en las tasas de
resangrado y reducción en la necesidad de Los estigmas endoscópicos de hemorragia
intervenciones quirúrgicas. Pero hay que te- reciente y de riesgo de re-sangrado son:
ner en cuenta que la adición del agente es-
clerosante aumenta el riesgo de complicacio- Signo Porcentaje
nes graves como perforación y necrosis, lo de resangrado
cual puede significar serias dificultades técni- Hemorragia arterial activa 90
cas en los casos que requieren cirugía. Vaso visible no sangrante 50
Coágulo adherente 25
MÉTODOS TÉRMICOS Hemorragia por filtración < 20
Nicho ulceroso limpio <5
La fotocoagulación con láser ha demostrado
eficacia en reducir los episodios de resan-

746
CAPÍTULO VII: HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA

TERAPÉUTICA ENDOSCÓPICA f. Antecedentes de complicaciones de úlce-


Y RADIOLÓGICA FALLIDAS ra péptica (perforación, obstrucción, hemo-
rragia).
En los pacientes en que la hemorragia activa g. Pacientes de alto riesgo quirúrgico o anes-
no se logra controlar por endoscopia o quienes tésico, cuya condición se puede deteriorar
durante la hospitalización hacen un nuevo epi- aún más.
sodio de sangrado, se debe considerar inme- h. Mayores de 60 años, cuya condición ge-
diatamente el manejo por radiología interven- neral se puede deteriorar rápidamente.
cionista para embolización arterial, infusión i. Tipos de sangre de difícil consecución.
intra-arterial o colocación de un TIPS (Trans-
jugular Intrahepatic Portosystemic Shunt), el El tratamiento quirúrgico implica una decisión
shunt portosistémico intrahepático trans- de fondo en cuanto al momento oportuno y a
yugular. la clase de procedimiento operatorio que se
debe emplear.
En los últimos 20 años el tratamiento de elec-
ción se ha basado en la hemostasia endos- La determinación de llevar al paciente a ciru-
cópica y la embolización radiológica. Se pro- gía debe ser tomada por un cirujano experto
cede con la intervención quirúrgica cuando los en acuerdo con el internista gastroenterólogo,
dos métodos anteriores han fallado. sólo cuando se haya descartado el uso de te-
rapia no operatoria o de que ésta haya fallado.
Ante un episodio de resangrado, se debe rea-
lizar una segunda endoscopia para intentar el La clase de operación varía de acuerdo con
control de la hemorragia y lograr la estabilidad la causa de la hemorragia y las enfermedades
hemodinámica como parte de la preparación asociadas. Un procedimiento inadecuado o
para cirugía. extemporáneo puede resultar en altas tasas
de hemorragia recurrente, las cuales en for-
ma característica se asocian con prohibitiva
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO mortalidad.

La indicación para operación se relaciona con


la velocidad, magnitud y duración del sangra- ÚLCERA DUODENAL SANGRANTE
do. Una política racional de cirugía urgente
resulta en reducción de la mortalidad. Se recomiendan dos tipos principales de ope-
ración, según la condición del paciente y las
Se reserva la operación para los pacientes con: características de la lesión:

a. Shock (PA <90mm Hg), el más importante a. Ligadura/sutura del vaso sangrante a tra-
factor de riesgo de resangrado. vés de una incisión de pilorotomía, seguida
b. Hemorragia mayor de 1.500 mL en 24 horas. de vagotomía y piloroplastia. Es un procedi-
c. Requerimiento de más de cinco unidades miento rápido, de fácil ejecución y que pro-
de glóbulos rojos. vee satisfactorio control de la hemorragia.
d. Presencia de resangrado a pesar de buen b. Antrectomía con vagotomía troncular, el
manejo médico. procedimiento de elección para el manejo
e. Historia de úlcera crónica con buen trata- del sangrado agudo y de la enfermedad
miento anterior. ulcerosa péptica.

747
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ÚLCERA GÁSTRICA SANGRANTE C. Bloqueadores H2 por vía IV.


D. Infusión de vasopresina en casos muy se-
El manejo de las úlceras gástricas sangran- leccionados.
tes que no ceden a la terapia no operatoria es E. Endoscopia de urgencia para diagnóstico
algo diferente: y terapia hemostásica.
F. Embolización angiográfica.
a. Gastrectomía subtotal con reconstrucción G. Cirugía, individualizando el procedimiento
tipo Billroth II con inclusión de la úlcera. Es- para cada tipo de paciente, dentro del
te es el procedimiento de elección si se trata concepto de doble riesgo:
de una úlcera prepilórica, o si la ulcera gás- 1. Pacientes de alto riesgo
trica está acompañada de úlcera duodenal; 2. Lesiones de alto riesgo
se debe añadir vagotomía troncular.
b. Resección en cuña de la úlcera gástrica
sangrante o sutura, en los pacientes de LECTURAS RECOMENDADAS
muy alto riesgo.
c. Vagotomía y piloroplastia, una vez contro- 1. Cook D, Guyatt G, Marshall J, Leasa D, et al. A
lado el sitio sangrante. comparison of sucralfate and ranitidine for the
prevention of upper gastrointestinal bleeding in
patients requiring mechanical ventilation.
Canadian Critical Care Trials Group. N Engl J Med
GASTRITIS EROSIVA HEMORRÁGICA 1998; 338:791-797.
2. Cook D, Heyland D, Griffith L, et al. Risk factors
El tratamiento quirúrgico es una decisión difí- for clinically important upper gastrointestinal
cil debido a que la mayoría de los pacientes bleeding in patients requiring mechanical
son de edad avanzada y se encuentran en ventilation. Canadian Critical Care Trials Group.
estado crítico. Crit Care Med 1999; 27:2812-2817.
3. Hawkey GM, Cole AT, McIntyre AS, et al. Drug
treatments in upper gastrointestinal bleeding: value
Los procedimientos recomendados, aunque
of endoscopic findings as surrogate end points.
no sin discrepancias, son: Gut 2001; 49:372-379.
4. Hernandez-Diaz S, Rodriguez LA. Incidence of
a. Vagotomía con piloroplastia, con sutura de serious upper gastrointestinal bleeding/perforation
los sitios sangrantes. in the general population: review of epidemiologic
b. Gastrectomía subtotal con vagotomía. studies. J Clin Epidemiol 2002; 55:157-163.
c. Gastrectomia total, procedimiento extremo 5. Patiño JF. Manejo de la hemorragia
que en ocasiones se hace necesario por la gastrointestinal alta. En: Lecciones de Cirugía. Por
JF Patiño. Editorial Médica Panamericana. Bogo-
magnitud y severidad de la hemorragia pri-
tá, Buenos Aires, 2001.
maria, o por sangrado recidivante luego de 6. Rollhauser C, Fleischer DE. Nonvariceal upper
un procedimiento menos radical. gastrointestinal bleeding: an update. Endoscopy
1997; 29:91-105.
7. Terdiman JP. Update on upper gastrointestinal
MANEJO DE LA HEMORRAGIA bleeding. Basing treatment decisions on patients’
risk level. Postgrad Med 1998; 103:43-47.
GASTROINTESTINAL ALTA
A. Resucitación.
B. Evacuación e irrigación del estómago con
solución salina.

748
CAPÍTULO VIII: HEMORRAGIA DE VÍAS DIGESTIVAS BAJAS AGUDAS

CAPÍTULO VIII

Hemorragia de vías digestivas bajas agudas

Eduardo Londoño Schimmer MD, FACS, MASCRS


Departamento de Cirugía, Servicio de Cirugía de Colon y Recto
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

E s el sangrado que se origina distal al liga-


mento de Treitz, a una rata mayor o igual
a 30 mL/h, y que produce anemia, inestabili-
Incidencia: la HVDB aguda es más frecuen-
te en los pacientes mayores de 50 años. En
el grupo de pacientes ancianos (>65 años) la
dad hemodinámica y/o la necesidad de trasfu- tasa de mortalidad en casos de hemorragia
sión sanguínea. La hemorragia puede ser masiva es 10-15%.
oculta, lenta, moderada o severa. Su tiempo
de evolución debe ser menor de 72 horas.
DEFINICIONES GENERALES
Generalidades: la hemorragia de vías digesti-
vas bajas (HVDB) constituye un problema Hematoquezia: es la evacuación rectal de
diagnóstico tanto para el internista como para sangre roja fresca o de color marrón. En 11-
el cirujano; por esta razón se requiere una eva- 20% de los pacientes con hemorragia de vías
luación multidisciplinaria, eficiente y ordenada. digestivas altas (HVDA), éste puede ser el sín-
La prioridad es estabilizar inicialmente al pa- toma principal porque el tiempo de tránsito
ciente, y efectuar un proceso diagnóstico ló- intestinal es menor de tres horas, o bien por-
gico para cada caso en particular, orientado a que existe una alta rata de sangrado.
un tratamiento individualizado.
Melena: evacuación de material negro, féti-
La HVDB tiende a ser autolimitada en 80-90% do. Resulta de la degradación bacteriana de
de los casos; sin embargo, recidiva en 10-25% la hemoglobina de la sangre estancada en la
de los pacientes. En el Reino Unido, 8% de luz intestinal. Usualmente se asocia con la
las admisiones hospitalarias se deben a he- HVDA, pero en pacientes con tránsito colónico
morragia gastrointestinal y es la causa de lento, un sangrado de colon proximal puede
muerte en 6.000 pacientes al año. Represen- presentarse como melena.
ta 500 a 1.200 admisiones por cada millón de
habitantes. En el estudio de Vernava y cola-
boradores la HVDB es el 0,7% de las admisio- ETIOLOGÍA
nes hospitalarias en un Centro Médico de Ve-
teranos. A pesar de los avances en los méto- Después de los 65 años, la enfermedad diver-
dos diagnósticos durante los últimos 20 años, ticular del colon es la causa más frecuente y
en 8-12% de los pacientes con HVDB no es representa entre el 30 y el 40% de los casos.
posible identificar el origen del sangrado. El riesgo estimado de sangrado en pacientes

749
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

con enfermedad diverticular es de 4-48%, y comas, linfomas, etc). En el paciente con trau-
en promedio es de 17% (14). En 80% de los ma abdominal se debe descartar la probabili-
pacientes con HVDB secundaria a enferme- dad de hematobilia.
dad diverticular, el sangrado se autolimita y
cesa espontáneamente. Sin embargo, luego
de un primer episodio de sangrado el riesgo DIAGNÓSTICO
de resangrado es de 25%, y luego de un se-
gundo episodio es de 50%. Este algoritmo de manejo se refiere al sangra-
do agudo; se remite al lector a otras revisio-
Las malformaciones arterio-venosas son la se- nes en las que se incluye el sangrado digesti-
gunda causa de HVDB; incluyen las ectasias vo bajo de tipo crónico.
vasculares, la angiodisplasia y los angiomas.
La colitis puede ser la causa de sangrado en En el paciente con HVDB que consulta en for-
el 9-21% de los casos. Incluye la colitis isqué- ma aguda el servicio de urgencias, la primera
mica, las infecciosas, la enfermedad inflamato- prioridad es establecer el estado hemodiná-
ria intestinal y la proctitis post-irradiación. Las mico del paciente. Cuando es evidente que el
neoplasias del colon y el sangrado post-poli- paciente presenta una hemorragia activa, se
pectomía representan el 11 al 14% de las debe instaurar de inmediato la resucitación
casos. siguiendo el ABC de la misma, protegiendo la
vía aérea, asegurando la ventilación y esta-
No se debe olvidar que entre el 11 y el 13% bleciendo dos líneas venosas calibre 14 o 16
de los pacientes que consultan por HVDB el para iniciar la infusión de cristaloides (Lactato
sangrado es de origen anal o rectal bajo. En de Ringer, solución salina normal).
este grupo de patologías se incluyen las he-
morroides internas, la fisura anal, las fístulas Se toman muestras sangre para determinacio-
anales, las várices rectales y el síndrome de nes de laboratorio (incluyendo hemoclasifi-
la úlcera rectal solitaria. cación) y reserva de glóbulos rojos: hemato-
crito, hemoglobina (recordar que su valor pue-
En aproximadamente 10-15% de los pacien- de no revelar el grado de pérdida de volumen
tes con sangrado rectal activo, el sitio de san- sanguíneo debido a una hemoconcentración
grado se localiza proximal al ligamento de y puede disminuir significativamente luego de
Treitz. Por lo tanto, es mandatorio descartar la hidratación), creatinina, nitrógeno ureico en
esta posibilidad mediante endoscopia de vías sangre, electrolitos séricos, glicemia, pruebas
digestivas altas. La colocación de una sonda de coagulación, incluido un tiempo de sangría.
nasogástrica y la aspiración gástrica son un
método poco fidedigno para descartar esta En los pacientes de más de 50 años, o con
posibilidad, por lo que preferimos la confirma- factores de riesgo cardiovascular, se debe
ción endoscópica. practicar un electrocardiograma. Se debe co-
locar una sonda vesical y llevar el paciente a
En 3-5% de los casos la HVDB se origina en monitoría si su estado hemodinámico o con-
el intestino delgado. Su evaluación es muy dición general lo requieren. El descenso de la
difícil. La causa más frecuente son las mal- tensión arterial en 10 mm de Hg o el aumento
formaciones arterio-venosas, el divertículo de de la frecuencia cardiaca en 10 pulsaciones
Meckel con mucosa gástrica ectópica ulcera- por minuto al cambiar de la posición de decú-
da y las neoplasias (leiomiomas, leiomiosar- bito supino a sentado indica una pérdida de

750
CAPÍTULO VIII: HEMORRAGIA DE VÍAS DIGESTIVAS BAJAS AGUDAS

aproximadamente 15% del volumen sanguí- positiva para sangre o cuando sea negativa
neo circulante; una taquicardia marcada con en el paciente con inestabilidad hemodinámi-
taquipnea, asociada a hipotensión y alteración ca. En nuestro servicio hemos adoptado como
del estado mental indica una pérdida sanguí- rutina la realización de una endoscopia de vías
nea de más de 1.500cc (30% del volumen cir- digestivas altas en el paciente con hemato-
culante. quezia y que haya presentado inestabilidad
hemodinámica, o bien que se encuentre he-
Mientras todas las medidas anteriores se lle- modinámicamente estable. Si el paciente se
van a cabo, se debe completar una excelente encuentra inestable y mientras se lleva a cabo
anamnesis, incluyendo el tiempo de evolución la reanimación y estabilización, si es posible
y la duración del sangrado, los síntomas aso- practicar una endoscopia de vías digestivas
ciados como dolor abdominal, cambios en el altas en la sala de urgencias, se debe proce-
hábito intestinal, fiebre, urgencia y tenesmo y der, sin que esto demore el traslado del pa-
pérdida de peso, los antecedentes familiares ciente al área de arteriografía.
y personales de sangrado digestivo, enferme-
dad ulcerosa, consumo de aspirina o de anti- Para establecer la causa de la HVDB se utili-
inflamatorios no esteroideos, uso de antico- zan otros métodos diagnósticos, entre los cua-
agulantes, coagulopatía, hepatopatías, diverti- les se incluyen la colonoscopia diagnóstica,
culosis, neoplasias, irradiación, enfermedad la arteriografía selectiva y la gamagrafía o
inflamatoria intestinal, cirugía anal y malfor- escintigrafía con glóbulos rojos marcados.
maciones arterio-venosas.
La colonoscopia es el método diagnóstico de
Determinación del sitio de sangrado: el elección en el paciente hemodinámicamente
examen físico debe ser completo y debe in- estable con sangrado activo pero de baja in-
cluir una evaluación integral para descartar tensidad, o bien en aquellos pacientes en quie-
síndromes que cursan con malformaciones nes el sangrado se ha detenido; se prepara el
arterio-venosas (por ejemplo el síndrome de paciente de manera convencional, con solu-
Osler-Weber-Rendu que cursa con telangiec- ciones como la fosfosoda (Fleet) o bien solu-
tasias). Se debe practicar un examen proctoló- ciones con polietilenglicol (Nuletely, Colite), por
gico completo: inspección, tacto rectal, anos- vía oral o por sonda nasogástrica. Estas pre-
copia y rectosigmoidoscopia rígida. En 11% paraciones permiten una excelente limpieza
de los pacientes en quienes se pensó que el del colon en un tiempo promedio de 2-4 ho-
origen del sangrado intestinal era bajo se en- ras. En los pacientes en que el sangrado es
contró que la causa era de origen alto; por lo todavía importante, pero hemodinámicamente
tanto, en la mayoría de los casos se debe prac- permanecen estables, la colonoscopia puede
ticar una endoscopia de vías digestivas alta. practicarse sin preparación previa o bien pre-
La utilización de la sonda nasogástrica como via colocación de enemas, y con este proce-
método diagnóstico en estos casos es muy dimiento se puede identificar la causa en 74-
controvertida, pues una aspiración positiva 85% de los casos. Una de las ventajas de la
confirma la presencia de sangrado digestivo colonoscopia es que puede ser terapéutica
alto pero la ausencia de sangre no descarta mediante el uso de la coagulación endoscó-
la posibilidad de sangrado duodenal. De pica por diversos métodos.
acuerdo con Zuccaro, se debe por lo tanto
practicar una endoscopia de vías digestivas En el paciente hemodinámicamente inestable,
altas cuando la aspiración nasogástrica sea que ingresa en shock hipovolémico con

751
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sangrado activo, el examen de elección es la localización errónea en 3-59% de los casos.


arteriografía selectiva que permite la identifica- En nuestro servicio la escintigrafía con glóbu-
ción del sangrado cuando la hemorragia ocu- los rojos marcados se utiliza en casos de san-
rre a una rata mayor o igual a 0,5 mL/min. La grado digestivo bajo intermitente, cuando el
sensibilidad de la arteriografía se encuentre paciente se encuentra hemodinámicamente
entre 40% y 86%, con una morbilidad de 2%. estable y la colonoscopia diagnóstica y la en-
Los falsos negativos pueden ser secundarios doscopia de vías digestivas alta han sido ne-
a una hemorragia intermitente que puede ser gativas, es decir en el paciente en quien no
el resultado de un vasoespasmo arterial y coa- se ha logrado establecer el origen del san-
gulación intermitente. En estos casos se pue- grado.
de inyectar papaverina para producir un efecto
vasodilatador que reproduzca la hemorragia La decisión quirúrgica, sin embargo, no puede
y facilite la determinación del sitio de sangrado. basarse únicamente en los hallazgos de la
La arteriografía se practica por vía femoral, escintigrafía, excepto en casos muy especia-
iniciando el procedimiento con una arteriogra- les. Se debe complementar con una arterio-
fía selectiva de la arteria mesentérica supe- grafía selectiva. Si a pesar de los métodos
rior. Si no se encuentra el sitio de sangrado, arteriográficos el origen exacto del sangrado
se cateteriza la mesentérica inferior, y si ésta no se puede establecer y el paciente persiste
a su vez es negativa, se debe explorar el tron- con sangrado o reaparece el sangrado, se
co celiaco. En situaciones de emergencia la debe considerar la necesidad de cirugía (3).
arteriografía es positiva en 87% de los casos. En los paciente jóvenes (<40 años) se debe
evaluar mediante escintigrafía con Tc99 per-
La escintigrafía (gamagrafía) con TC99m es nactato la posibilidad de mucosa gástrica
un método no invasor que ayuda a localizar el ectópica con ulceración y sangrado a partir
área de sangrado de según la concentración de un divertículo de Meckel (sensibilidad del
del radiomarcador en uno de los cuadrantes 85-95%).
del abdomen. Es un examen muy sensible que
detecta hemorragia de baja rata (0,05-0,1 mL/ El uso del enema de bario está absolutamen-
min). te contraindicado como método diagnóstico o
“terapéutico”. Empíricamente se pensaba que
Existen dos métodos: el Tc99m coloide-sulfu- el bario producía “oclusión” del sitio de san-
rado y los glóbulos rojos marcados de TC99m. grado en el caso de la enfermedad diverticular
La ventaja del primero es que no requiere pre- complicada con sangrado. Este estudio no
paración y que se puede inyectar de inmedia- sólo no permite la realización de otros estu-
to. Sin embargo, el sistema reticuloendotelial dios de imágenes diagnósticas durante varios
produce una aclaración muy rápida del pro- días, sino que si por algún motivo es necesa-
ducto (vida media de 2-3 minutos). rio llevar al paciente a cirugía el riesgo de una
peritonitis química con alto riesgo de mortali-
El método con glóbulos rojos marcados con dad es prohibitivo.
TC99m es el de elección, porque posee una
vida media más larga y permite hacer la eva-
luación, incluso 24 horas después de la in- TRATAMIENTO
yección. Este método posee una sensibilidad
de 80-98%. Sin embargo, la certeza diagnós- El paciente con compromiso hemodinámico o
tica varía entre 52% y 78% (34-36), y da una mayor de 65 años con sangrado moderado a

752
CAPÍTULO VIII: HEMORRAGIA DE VÍAS DIGESTIVAS BAJAS AGUDAS

severo y el paciente con enfermedades de selectiva, utilizando catéteres 2 ó 3 Fr. Se


base (cardiovasculares, pulmonares, renales) debe conocer muy bien el mapa vascular
debe ser remitido a la unidad de cuidado in- del sitio del colon que se va a embolizar, a
tensivo para monitoría permanente. fin de disminuir el riesgo de isquemia y pos-
terior necrosis. Sin embargo, puede ser una
El tratamiento puede ser de tres tipos: medida terapéutica muy útil en el paciente
hemodinámicamente inestable, porque per-
1. Endoscópico: mite controlar el sangrado rápidamente,
- termo y electrocoagulación (alto riesgo continuar la resucitación, mejorar su con-
de perforación). dición y hace posible llevarlo a cirugía en
- fotocoagulación con NdYAG láser para mejores condiciones. La arteriografía tie-
las malformaciones arteriovenosas. ne una tasa de morbilidad de 2-4%, que
2. Angiográfico: incluye alergia al medio de contraste, falla
- vasopresina supraselectiva y selectiva renal secundaria al medio de contraste,
(malformaciones A-V, y enfermedad sangrado del sitio de punción o embolismo
diverticular). a partir de una placa ateromatosa o de un
- embolización selectiva, procedimiento trombo mural.
que se asocia con una tasa de morbili- 3. Quirúrgico
dad de 14-72 %, por trombosis arterial El tratamiento quirúrgico de emergencia es
distal y falla renal. necesario en 10-25% de los casos.
Si el sitio de sangrado se identifica duran-
te la arteriografía, se debe iniciar una infu- Indicaciones:
sión de vasopresina selectivamente a tra- 1. Trasfusión de 3 ó más unidades de glóbu-
vés del catéter de arteriografía, siempre y los rojos durante la resucitación y eviden-
cuando no exista contraindicación para su cia de sangrado persistente.
uso, en dosis de 0,2 a 0,4 m/min. A los 20 2. Trasfusión de 4 ó más unidades de glóbu-
minutos de iniciada la infusión se repite la los rojos en 24 horas para mantener esta-
arteriografía, y si el sangrado se ha con- bilidad hemodinámica.
trolado se debe mantener la infusión selec- 3. Sangrado persistente por más de 72 horas.
tiva de vasopresina durante 6 a 12 horas. 4. Resangrado antes de 7 días, con inestabi-
El paciente es llevado nuevamente a arte- lidad hemodinámica.
riografía, y si no hay evidencia de sangrado 5. Tipo y grupo sanguíneo de difícil consecu-
se retira el catéter. La vasopresina contro- ción.
la el sangrado en 36-100% de los casos.
La posibilidad de resangrado es de 22- Cuando el sitio de sangrado ha sido identifi-
71%. La vasopresina produce contracción cado antes de la operación, la resección debe
del músculo liso especialmente en los ca- ser segmentaria, un procedimiento que tiene
pilares, vénulas y arteriolas. Es necesaria menor morbi-mortalidad y riesgo de resangra-
una monitoría estricta del paciente en la do. En un paciente hemodinámicamente ines-
unidad de cuidado intensivo durante la in- table, con sangrado activo y en quien la arte-
fusión de vasopresina, por la posibilidad de riografía es negativa, y que debe ser llevado
espasmo coronario. La embolización supra- a cirugía, no se debe practicar una colectomía
selectiva con coágulos autólogos, espira- segmentaria a ciegas, pues el riesgo de rere-
les de Gianturco, espirales de platino o par- sangrado es mayor a 75% y la mortalidad al-
tículas de polivinil alcohol debe ser muy canza 50%.

753
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Entre 5% y 10% de los casos son sometidos 9. Bloomfield RS, Rockey DC, Shetzline MA.
a laparotomía exploratoria sin identificación Endoscopic therapy of acute diverticular
previa del sitio de sangrado, lo cual implica hemorrhage. 2001; 96:2637-2372.
10. Bokhari M, Vernava AM, Ure T, Longo WE.
que en el transoperatorio se debe establecer
Diverticular hemorrhage in the elderly: is it well
el sitio de sangrado mediante colonoscopia, tolerated? Dis Colon Rectum 1996; 39:191-195.
gastroduodenoscopia o panenteroscopia intra- 11. Boley SJ, Dibiase A, Brandt LJ, Sammartano R.
operatoria. La panenteroscopia se puede prac- Lower intestinal bleeding in the lederly. Am J Surg
ticar por vía oral mediante el uso de un colo- 1979; 137:57-64.
noscopio (longitud 160 a 300cms) o a través 12. Buchman TG, Bulkley GB. Current management
de una enterotomía. Si a pesar de estas me- of patients with lower gastrointestinal bleeding.
didas el sitio de sangrado no se puede esta- Surg Clin North Am 1987; 67:651-64.
13. Cappel MS, Friedel D. The role of sigmoidoscopy
blecer, se debe practicar una colectomía sub-
and colonoscopy in the diagnosis and manage-
total con ileoproctostomía o con ileostomía ment of lower gastrointestinal disorders: findings,
terminal y cierre del muñón rectal tipo Hart- therapy and complications. Med Clin North Am
mann, opción que se asocia con un bajo ries- 2002; 86:1253-88.
go de resangrado (8-60%) y baja mortalidad 14. Chin A, Singer M, Mihalov M, et al. Superselective
(10-40%) . Ver flujograma. mesenteric embolization with microcoils in a
porcine model. Trabajo presentado en el congre-
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CAPÍTULO VIII: HEMORRAGIA DE VÍAS DIGESTIVAS BAJAS AGUDAS

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755
756
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

a) Si el examen proctológico demuestra la causa de sangrado obviar la endoscopia de vías digestivas altas; si la clínica lo amerita colonoscopia complementaria
b) Si es posible practicar la endoscopia de vías digestivas altas en la sala de urgencias, mientras se realiza la resucitación, se debe practicar, siempre y cuando no demore el
traslado del paciente al área de arteriografía
c) Estable luego de resucitación
d) Se aplica flujograma del paciente estable
CAPÍTULO IX: DISFAGIA

CAPÍTULO IX

Disfagia

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina
Bogotá

Carlos Sánchez David, MD


Profesor Asociado de Medicina Interna
Facultad de Medicina, Universidad El Bosque
Bogotá

INTRODUCCIÓN

D isfagia es la dificultad para deglutir ali-


mentos. Es diferente a la odinofagia, que
es el dolor al deglutir. Los síntomas asociados
de edad avanzada tienen un mayor riesgo de
padecer disfagia y sus complicaciones.

con disfagia son comunes, especialmente en


personas de edad avanzada. Aproximada- FISIOPATOLOGÍA
mente el 7-10% de los adultos mayores de 50
años tiene disfagia. En los pacientes hospita- La disfagia puede ser causada por enfermeda-
lizados este porcentaje puede llegar a 30-40%. des que impiden iniciar la deglución o por ano-
malías que impiden continuarla. El primer caso
La dificultad para deglutir, frecuentemente en se conoce como disfagia orofaríngea y el se-
forma de episodio agudo, pero también como gundo como disfagia esofágica.
síntoma crónico, trae al paciente a los servi-
cios de urgencias. Siempre debe alertar so- En la disfagia orofaríngea los síntomas son el
bre la posibilidad de un carcinoma. resultado de la incapacidad de paso del bolo
alimenticio a través del esfínter esofágico su-
perior al esófago. La disfagia orofaríngea es
EPIDEMIOLOGÍA más común en los pacientes de edad avanza-
da. La enfermedad cerebrovascular es la cau-
Las enfermedades del esófago se encuentran sa principal.
entre las primeras 50 causas por las cuales las
personas buscan atención médica. Las enti- La disfagia de origen esofágico se debe a al-
dades patológicas que causan disfagia pueden teraciones de la motilidad o a condiciones obs-
producir ruptura esofágica, deficiencias nutri- tructivas del esófago. La acalasia y la escle-
cionales y neumonía aspirativa. Los pacientes rodermia son las causas más comunes de

757
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

alteraciones en la motilidad que producen CUADRO CLÍNICO


disfagia. El carcinoma es la causa más fre-
cuente de disfagia obstructiva: en todo caso SÍNTOMAS
de disfagia se debe descartar la presencia de
un carcinoma del esófago. Los pacientes con disfagia orofaríngea se pre-
sentan con dificultad para iniciar la deglución.
Pueden tener regurgitación de alimentos por
ETIOLOGÍA la nariz. Este tipo de disfagia está asociado
con enfermedad cerebrovascular, enfermedad
Las causas de disfagia aparecen en la siguien- de Parkinson y otros tipos de enfermedades
te tabla. neuromusculares.

Los individuos con desórdenes neuromuscula-


CAUSAS DE DISFAGIA res se quejan de dificultad progresiva para de-
glutir alimentos, tanto sólidos como líquidos.
• Mecánicas Pueden tener dolor con cada uno de los es-
Intrínsecas fuerzos deglutorios. Cuando la causa es obs-
Estenosis péptica benigna tructiva la dificultad para pasar se presenta
Carcinoma principalmente con alimentos sólidos.
Anillo esofágico inferior
Tumor benigno Es muy importante preguntar por la progre-
Lesión por cáustico sión de la disfagia. La disfagia transitoria y de
Divertículo de Zenker corta duración puede ser debida a un proceso
Extrínsecas inflamatorio. La disfagia rápidamente progre-
Tumores malignos siva es sugestiva de carcinoma esofágico. La
Tiroides retroesternal pérdida de peso tiende a ser producida más
Compresión vascular por una causa obstructiva que por una causa
• Neuromusculares mecánica. Cuando la disfagia es episódica y
Trastornos del músculo liso principalmente para sólidos, con varios años
Acalasia de evolución es sugestiva de un proceso be-
Espasmo esofágico difuso nigno como anillo esofágico inferior.
Esclerodermia
Enfermedad de Chagaso
Trastornos del músculo estriado EXAMEN FÍSICO
Acalasia cricofaríngea
Polimiositiso Un examen físico cuidadoso puede identificar
Trastornos neurológicos la causa de disfagia. Es necesario realizar una
Enfermedad desmielinizante evaluación neurológica dirigida especialmen-
te a los nervios craneanos involucrados en la
Tomado de: Sánchez C. Disfagia. En: Guías para deglución. Estos son el V, VII, IX, X, XI.
Manejo de Urgencias. Ministerio de Salud, Fede-
ración Panamericana de Asociaciones de Faculta-
La ausencia del reflejo nauseoso se asocia
des (Escuelas) de Medicina. Bogotá, 1996.
con un mayor riesgo de aspiración. La inspec-
ción meticulosa de la boca y de la faringe per-
mite descubrir lesiones que pueden interferir

758
CAPÍTULO IX: DISFAGIA

con el paso del alimento por la boca o el esó- La endoscopia tiene el beneficio adicional de
fago por causa de dolor u obstrucción. detectar infección o erosión de la mucosa con
la capacidad de realizar biopsias.
Pueden encontrarse masas en la glándula tiroi-
des que causan disfagia de origen obstructivo. MANOMETRÍA

En la piel es posible encontrar signos de en- La manometría está indicada cuando no se


fermedades del colágeno que pueden afectar encuentran anormalidades en el esofagogra-
el esófago como la esclerodermia. ma con bario o en la endoscopia. Su uso en
enfermedades del esfínter esofágico superior
no es efectivo, debido a que la mayoría de los
EXÁMENES DIAGNÓSTICOS pacientes no toleran el procedimiento.

La historia clínica y el examen físico identifican OTROS ESTUDIOS


la etiología de la disfagia en la mayoría de los
pacientes. En algunos casos es necesario utili- Las radiografías simples de tórax y de cuello
zar otros medios para confirmar el diagnóstico. ofrecen información limitada a menos que se
encuentren anomalías estructurales eviden-
NASOFARINGOSCOPÍA tes. Los estudios con radionuclidos pueden
usarse para evaluar el tránsito del alimento
Es particularmente útil para evaluar pacientes por el esófago.
con disfagia orofaringea. Este procedimiento
identifica de forma rápida masas y otras le- CONCLUSIÓN
siones estructurales de la faringe. También
examina la sensibilidad de la laringe para des- La presencia de disfagia indica un carcinoma
cartar causas neurológicas. de esófago hasta que se pruebe lo contrario.
Requiere un endoscopia a la mayor brevedad
ESOFAGOGRAMA posible.

Un examen con bario es el primer paso para


estudiar los pacientes con disfagia, especial-
mente cuando se sospecha una lesión obs- LECTURAS RECOMENDADAS
tructiva. Identifica lesiones estructurales intrín-
secas y extrínsecas del esófago. El esofago- 1. Scolapio JS, Gostout CJ, Schroeder KW, et al.
grama permite observar mejor las alteracio- Dysphagia without endoscopically evident disease:
nes de la motilidad que la endoscopia. No es to dilate or not? Am J Gastroenterol 2001; 96:327-
costoso y tiene pocas complicaciones. 330.
2. Colon VJ, Young MA, Ramirez FC. The short- and
long-term efficacy of empirical esophageal dilation
ENDOSCOPIA in patients with nonobstructive dysphagia: a
prospective, randomized study Am J Gastroenterol
La endoscopia es el mejor método para eva- 2000; 95:910-913.
luar la mucosa esofágica. En los pacientes que 3. Sánchez C. Disfagia. En: Guías para Manejo de
desarrollan disfagia aguda cuando están co- Urgencias Ministerio de Salud. Federación Pana-
miendo, la endoscopia puede identificar el si- mericana de Asociaciones de Facultades (Escue-
tio de estancamiento del alimento y removerlo. las) de Medicina. Bogotá, 1996.

759
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IX

Hepatitis en urgencias

Víctor Idrovo, MD
Sección de Hepatología
Clínica Marly
Bogotá

E n los servicios de urgencias es frecuente


la consulta por ictericia o síntomas que
son compatibles con hepatitis.
3. Inmunológicas: hepatitis autoinmunes.
4. Metabólicas: enfermedad de Wilson, defi-
ciencia de alfa 1 antitripsina, hemocroma-
tosis y las esteatohepatitis no alcohólicas.
Hepatitis es el proceso necroinflamatorio del 5. Vasculares: hepatitis isquémicas asociadas
hígado debido a diversas etiologías; se carac- a estados de shock e hipotensión prologa-
teriza por síntomas variables constitucionales, da, o hepatitis congestivas asociadas a
malestar general y elevación de las amino- obstrucción del flujo hepático de salida a
transferasas (AST, ALT) y las bilirrubinas. En la circulación sistémica (p.ej. Budd Chiari
ocasiones se asocia con colestasis importan- y enfermedad veno-oclusiva hepática).
te, la cual se manifiesta por prurito, coluria y
elevación de la fosfatasa alcalina (FA) y la
gama glutamil transpeptidasa (GGTP). EVALUACIÓN Y MANEJO DE LAS
HEPATITIS EN URGENCIAS
En la mayoría de los casos, las hepatitis son
procesos que se autolimitan sin dejar secuelas, Cuando un paciente consulta al servicio de
pero pueden pasar a enfermedad crónica con urgencias por hepatitis, se recomienda la eva-
riesgo de cirrosis y hepatocarcinoma; también luación en urgencias por el hepatólogo para
pueden presentarse con insuficiencia hepática decidir si se requiere hospitalización o se pue-
severa o falla hepática fulminante, con alta mor- de establecer tratamiento ambulatorio.
talidad si no se llevan a trasplante hepático.
En general, mientras un cuadro de hepatitis
aguda no curse con insuficiencia hepática, se
Según su causa, las hepatitis se pueden divi-
puede tratar en forma ambulatoria y se con-
dir en:
trola en la consulta externa.
1. Virales: son agudas las hepatitis A, E y la
mayoría por virus B; y crónicas las C y al- En el servicio de urgencias se deben solicitar
gunas B con o sin sobreinfección por D. los siguientes exámenes: hemograma con
En raras ocasiones están presentes otros recuento de plaquetas, bilirrubinas, AST, ALT,
virus como citomegalovirus, herpes, vari- FA, PT, PTT, glicemia, creatinina sérica, uro-
cela zoster, Epstein-Barr, fiebre amarilla, análisis y ecografía abdominal.
dengue, sarampión, rubéola y adenovirus.
2. Tóxicas: por medicamentos, productos na- Son indicadores paraclínicos de hospitaliza-
turales y biológicos, medicamentos “alter- ción por insuficiencia hepática severa los
nativos” y por alcohol. siguientes hallazgos:

760
CAPÍTULO X: HEPATITIS EN URGENCIAS

• PT prolongado más de 18 segundos, o más antipiréticos, ni anti-inflamatorios. El reposo


de 6 segundos sobre el control, o con un total no está indicado y se le permite realizar
INR por encima de 1,7. actividades normales en la medida que su
• Bilirrubina total, más de 18 mg/dL. estado general se lo permita. Se recomienda
• Hipoglicemia. asistir a la consulta externa para revisar los
• Presencia de ascitis en la ecografía. resultados de las serologías virales con el fin
de confirmar un diagnóstico, o para continuar
Clínicamente, está indicada la hospitalización un estudio más profundo si se descarta hepa-
cuando la hiporexia, las náuseas y el vómito titis viral y se piensa en otra etiología.
son severos e impiden la hidratación o la ali-
mentación adecuada. Situaciones especiales en urgencias:

En el contexto de una hepatitis aguda con in- 1. Falla hepática fulminante: Ante ella, se
suficiencia hepática, la aparición de encefalo- debe:
patía hepática es criterio diagnóstico de falla • Trasladar a la unidad de cuidados inten-
hepática fulminante. En esta situación, el pa- sivos.
ciente debe ser trasladado a la unidad de cui- • Avisar inmediatamente al hepatólogo y
dados intensivos para soporte, y debe ser in- al cirujano de trasplantes.
mediatamente valorado por el hepatólogo y • Iniciar infusión IV de dextrosa si hay
el cirujano de trasplante hepático porque pue- hipoglicemia.
de necesitar este procedimiento. • Iniciar lactulosa por vía oral o por ene-
mas si hay encefalopatía
Al tiempo con la atención del caso, en el ser- • Iniciar n-acetilcisteína IV en dosis de 100
vicio de urgencias se hace un interrogatorio a 150 mg/kg/día para todas las fallas hepá-
exhaustivo sobre los antecedentes del pacien- ticas fulminantes, especialmente para las
te y se decide qué exámenes realizar con el causadas por toxicidad por acetaminofén.
fin de establecer la etiología de la hepatitis. • Iniciar vitamina K 10 mg SC al día para
Primero, se averigua sobre el consumo de controlar la coagulopatía, transfundir
medicamentos farmacéuticos o alternativos, plasma sólo si hay fenómeno hemorrá-
uso de drogas ilícitas o consumo de alcohol, gico asociado.
para evaluar la posibilidad de hepatitis de tipo
tóxico. Luego se solicitan marcadores virales 2. Ascitis:
para detectar la presencia de hepatitis viral • Realizar paracentesis diagnóstica en ur-
aguda; se piden anticuerpos contra hepatitis gencias: examen citoquímico y bacte-
A IgM, antígeno de superficie para hepatitis B riológico del líquido obtenido, para des-
y anticuerpos contra el core IgM de hepatitis cartar peritonitis espontánea.
B. La hepatitis C en forma aguda es extrema- • Iniciar descontaminación profiláctica con
damente rara. Estos exámenes se pueden norfloxacina 400 mg al día, si la ascitis
realizar en el hospital si el paciente se va a es portal hipertensiva (gradiente de al-
hospitalizar, pero se le solicitan en forma am- búmina mayor de 1,1 dado por la cifra
bulatoria si se le da salida en urgencias. de albúmina sérica menos la albúmina
de la ascitis) y no hay presencia de
Si el paciente es enviado a su domicilio, se le peritonitis.
indica consumir dieta normal, no consumir al- • Iniciar cefotaxime 2 g cada 8 horas IV si
cohol y en lo posible no consumir analgésicos, hay diagnóstico de peritonitis espontá-

761
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

nea (citoquímico con >250 PMN por LECTURAS RECOMENDADAS


mm3 o cultivo positivo). Cambiar el anti-
biótico si la sensibilidad del antibiograma 1. Aithal PG, Day CP. The natural history of
así lo indica. histologically proved drug induced liver disease.
Gut 1999; 44:731-735.
2. Botero RC. Hepatitis viral. En: Gastroenterología.
3. Náuseas y vómito persistentes:
Editado por A Hani, O Gutiérrez, J Alvarado. Pri-
• Hidratación parenteral con cristaloides. mera edición. Mc Graw Hill. Bogotá, 2001.
• Dieta líquida clara según tolerancia, lue- 3. Dargan PI, Jones AL. Acetaminophen poisoning:
go avanzar a dieta blanda. an update for the intensivist. Crit Care 2002; 6:108-
• Antieméticos como metoclopramida 10 110.
mg IV o alizapride 50 mg IV según ne- 4. Idrovo V. Insuficiencia hepática aguda. En: Gastro-
cesidad. enterología. Editado por: A Hani, O Gutiérrez, J
• Control de electrolitos y nitrogenados. Alvarado. Primera edición. Mc Graw Hill, Bogotá,
2001.
5. Idrovo Victor. Hepatitis Autoinmune. Revista co-
4. Insuficiencia hepática sin encefalopatía: lombiana de Gastroenterol 2000; 15
• Tratamiento igual que la falla hepática www.encolombia.com/medicina/gastroenterologia
fulminante pero en habitación hospita- 6. JG O´grady, JR Lake, PD Howdle . Comprehensive
laria o en cuidados intermedios. Clinical Hepatology. 1st edition .Mosby. St Louis,
• No requiere lactulosa. 2000.
• Indispensable, tratamiento dirigido por 7. Kelly DA. Managing liver failure. Postgrad Med J
el hepatólogo. 2002; 78:660-667.
8. Koff RS. Acute viral hepatitis. En: Liver. Editado
• Valoración por cirujano de trasplante se-
por WC Maddrey, M Feldman. Current Medicine.
gún evolución. 2nd edition, Appleton Lange. Narwalk, 1999.
9. Murphy N, Wendon J. Fulminant hepatic failure.
En Evidence Based Gastroenterology and
Hepatology. Editado por JM McDonald, AK
Burroughs, BG Feagan. 1st edition. BMJ Books.
London, 1999.
10. Seeto RK, Fenn B, Rockey DC. Ischemic hepati-
tis: clinical presentation and pathogenesis. Am J
Med. 2000; 109:109-113.

762
CAPÍTULO XI: FALLA HEPÁTICA AGUDA

CAPÍTULO XI

Falla hepática aguda

Manuel Mojica Peñaranda, MD


Profesor titular de Gastroenterología
Universidad Libre, Barranquilla
Vicepresidente Asociación Colombiana de Hepatología

Elisa Mojica Muñoz, MD


Hospital de Puerto Colombia

L a falla hepática aguda, que presenta ele-


vada mortalidad. Su etiología es diversa.
Está caracterizada por el inicio en forma súbita
CAUSAS
Las causas de falla hepática aguda son:
de disfunción hepática severa que se manifies- • Hepatitis viral: Hepatitis A,B,C y E, virus del
ta por ictericia, encefalopatía hepática y herpes simple, virus de Epstein-Barr, cyto-
coagulopatía sin que se hubiera documentado megalovirus, paramixovirus.
hepatopatía preexistente y que rápidamente • Toxicidad por acetaminofén: intento de sui-
ocasiona falla orgánica multisistémica que a cidio, accidental.
menudo produce la muerte. • Toxicidad farmacológica: antimicrobianos
(amoxacilina clavulanato, ciprofloxacina,
La falla hepática aguda se clasifica en hiper- eritromicina, isoniazida, nitrofurantoína,
aguda, aguda y subaguda de acuerdo al in- tetraciclina), valproato sódico, lovastatina,
tervalo entre la ictericia y la encefalopatía, de fenitoína, tricíclicos, halotano, oro, flutami-
0-7 días, de 8-28 días y de 29 días a 12 se- da, dipiridio, antabuse, ciclofosfamida, éx-
manas, respectivamente. A pesar de que, ge- tasis, loratadina, pemolina, propiltiouracilo
neralmente, junto con la falla hepática hiper- y troglitazona. Hay que anotar que cada
aguda se encuentra edema cerebral, tiene vez se encuentran más medicamentos que
mejor pronóstico en comparación con los tipos producen esta enfermedad.
agudo y subagudo. En esta clasificación se • Otras toxinas: Amanita phalloides, solven-
incluyen los casos de enfermedad hepática tes orgánicos, medicinas herbolarias (gin-
crónica asintomática o desconocida cuyo pri- seng) y toxinas bacterianas (Bacillus cereus
mer síntoma es la falla hepática aguda, por y cianobacterias).
ejemplo la enfermedad de Wilson o una sobre- • Causas diversas: hígado graso agudo del
infección con HDV en un paciente con hepati- embarazo, hepatitis autoinmunitaria, sín-
tis B crónica. drome de Budd-Chiari, insuficiencia cardía-
ca, eclampsia, golpe de calor, isquemia, de-
ficiencia de aciltransferasa de lectina y
colesterol, leucemia, linfoma, metástasis
hepáticas, paludismo, síndrome de Reye y
enfermedad de Wilson

763
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EPIDEMIOLOGÍA trado inflamatorio, macrófagos cargados de


pigmento y células de Kupffer con detritos celu-
En Estados Unidos y en Inglaterra la primera lares en su interior. En el examen histológico
causa es por intoxicación farmacológica (ace- es imposible diferenciar la necrosis hepática
taminofén), seguido por los virus; sin embar- masiva producida por virus de la producida por
go, hay un porcentaje entre 15-20% de pacien- tóxicos. En los pacientes que han sobrevivido
tes con falla hepática aguda en que no se pue- algunos días, se evidencian signos de regene-
de identificar causa alguna, por lo que se con- ración como mitosis y nódulos regenerativos.
sidera idiopática. En Europa y en el resto del
mundo la causa más frecuente son las infec-
ciones por virus, seguidas por las reacciones CUADRO CLÍNICO
a fármacos o tóxicos; aproximadamente en una
tercera parte no es posible identificar la causa. La falla hepática aguda se presenta con un
inicio brusco de la sintomatología en la mayo-
ría de los pacientes: fatiga, malestar general,
ANATOMÍA PATOLÓGICA pérdida del apetito, náuseas, coluria e icteri-
cia, con menos frecuencia dolor abdominal y
Se produce necrosis hepática masiva, la cual fiebre. A esta sintomatología le sigue el inicio
se caracteriza por desaparición casi total de de la encefalopatía hepática, edema periféri-
hepatocitos por necrosis, sustituidos por infil- co y ascitis.

Clínica Ex. paraclínicos


Ictericia Hiperbilirrubinemia
Encefalopatía Elevación de aminotransferasas
Disminución del tamaño hepático Disminución de protrombina y factor V

ENCEFALOPATÍA

Es un requisito para poder establecer el diag- de la encefalopatía se clasifica según los as-
nóstico de falla hepática aguda. La severidad pectos clínicos.

Etapa Estado mental Temblor Electroencefalografía


I Euforia y depresión ocasional; confusión leve fluctuante; Ligero Por lo general normal
actividad mental y afecto bajos; descuido personal; habla
arrastra da; trastornos en el ritmo del sueño
II Intensificación de la etapa I; somnolencia; conducta ina- Presente (se desencade- Anormal; lentificación
propiada; capaz de conservar el control de esfínteres na con facilidad) generalizada
III Duerme la mayor parte del tiempo pero se puede desper- Suele encontrarse si el Siempre anormal
tar; su habla es incoherente; su confusión es notable paciente puede colaborar
IV No se puede despertar; puede reaccionar o no a los estí- Suele estar ausente Siempre anormal
mulos dolorosos

Tomado de: Bernstein D, Tripodi J. Fulminant hepatic failure. Crit Care Clinics 1998;14:181-197.

764
CAPÍTULO XI: FALLA HEPÁTICA AGUDA

En la falla hepática aguda la autorregulación fiestan por oliguria,retención de sodio y agua,


del flujo cerebral de oxígeno se ve trastorna- indicadores de mal pronóstico. Es el resulta-
da y, por lo tanto, la disminución de la presión do de un trastorno funcional (síndrome hepa-
arterial media puede producir hipoxia cerebral, torrenal), de necrosis tubular aguda o prerrenal
mientras que el aumento puede exacerbar la por hipovolemia.
hipertensión endocraneana. Para el diagnós-
tico de hipertensión endocraneana son de
poca confianza los signos clínicos como el EFECTOS SOBRE LA COAGULACIÓN
papiledema, rigidez de descerebración, con-
vulsiones, dificultad respiratoria e hipertensión. El hígado es el sitio primario de síntesis de
La utilidad de la TAC es limitada, debido a que los factores de coagulación, por lo cual el
la ausencia de los cambios producidos por sangrado es una manifestación clínica de
edema cerebral no excluye la presencia de suma importancia. Se evidencia por sangra-
hipertensión endocraneana. do digestivo alto, el cual ha disminuido gra-
cias a la profilaxis con antagonistas H2. Otros
lugares frecuentes de sangrado son naso-
ICTERICIA faringe, pulmones, retroperitoneo y tejidos
subcutáneos.
Aparece temprano en la evolución y progresa
rápidamente, alcanzando cifras de bilirrubine-
mia total superiores a 25 mg/dL, a expensas
INFECCIONES BACTERIANAS Y FÚNGICAS
de ambas bilirrubinas, pero especialmente la
directa. Las transaminasas se elevan hasta
La mayoría de las infecciones se originan en
50 veces los valores normales, pero descien-
las vías respiratorias y urinarias. Setenta por
den en 5-6 días por la necrosis hepática.
ciento se deben a bacterias Grampositivas
como Staphylococcus aureus y epidermidis y
EFECTOS CARDIORRESPIRATORIOS estreptococos. Generalmente se presentan
temprano en la evolución clínica y hasta en
Se caracteriza por estado circulatorio hiperdi- un tercio de los pacientes puede ser silente
námico, con vasodilatación generalizada, re- sin signos de respuesta inflamatoria sistémica
sistencia vascular cerebral baja, hipotensión
y aumento del gasto cardíaco. El aporte de También son frecuentes las infecciones micóti-
oxígeno a los tejidos es suficiente o incluso cas por Candida albicans o Candida glabrata,
aumentado, pero hay disminución en la ex- las cuales tiene una alta tasa de mortalidad.
tracción tisular y bajo consumo de éste, lo cual
origina hipoxia tisular y acidosis láctica que
conduce a falla multisistémica. También se ALTERACIONES METABÓLICAS
presenta edema pulmonar no cardiogénico y Y DEL EQUILIBRIO ÁCIDO-BASE
síndrome de dificultad respiratoria del adulto.
La hipoglucemia es frecuente debido a que
se agotan las reservas hepáticas de glucó-
EFECTOS RENALES geno con gluconeogénesis defectuosa. Se
debe monitorizar en forma horaria las cifras
Ocurren como parte de la falla orgánica multi- de glucemia. Otras complicaciones son la
sistémica en 55-84% de los casos. Se mani- hipertensión portal y la ascitis.

765
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DIAGNÓSTICO general y pulmonar. Se recomienda colocar


un catéter venoso central (catéter de Swan-
Se debe identificar la etiología mediante una Ganz) en caso de inestabilidad hemodinámica,
anamnesis detallada en la que se interrogue catéter arterial, sonda vesical y nasogátrica e
sobre exposición a tóxicos, ingesta de fárma- intubación orotraqueal si la encefalopatía es
cos o antecedentes de exposición a virus. Se grado III o IV. La vigilancia de la presión endo-
continúa con el examen físico y paraclínicos craneana y de la hemorragia cerebral ofrece
como marcadores virales, determinación de una posibilidad para reducir el riesgo de muer-
tóxicos en caso de sospecha (acetaminofén te cerebral.
en sangre y alfa amanitinas en orina), ecogra-
fía abdominal para descartar enfermedad he- Se debe realizar en forma seriada hemogra-
pática crónica o lesiones ocupantes de ma, gases, electrolitos, pruebas de función
espacio. renal. El control de la función hepática se hace
todos los días (como mínimo bilirrubinas y PT).
El siguiente paso es el diagnóstico temprano Los pacientes pueden recibir dieta hipopro-
de las posibles complicaciones asociadas a teica (20-40 g de proteínas/día) únicamente
la falla hepática aguda. si presentan encefalopatía estado I o II. Si
presenta encefalopatía más avanzada deben
recibir dieta absoluta. No se ha demostrado
TRATAMIENTO INICIAL que la nutrición parenteral sea de beneficio
en esta situación.
Los pacientes con falla hepática aguda pue-
den deteriorarse rápidamente y en forma im- El tratamiento antiviral tiene utilidad limitada
predecible. Se hace necesaria la vigilancia en los casos agudos, se benefician especial-
neurológica estrecha. Es frecuente la inestabi- mente los pacientes que tienen hepatitis agu-
lidad hemodinámica, la disfunción respirato- da por virus herpes, como el de Epstein-Barr
ria e hipoxemia que empeoran la lesión neuro- o el del herpes simple.
lógica, por lo que es necesario realizar en for-
ma rutinaria vigilancia de la presión arterial Para la remoción de los desechos hepáticos
de manera invasora y pulsoximetría. se ha usado la hemofiltración continua y las
transfusiones de plasma; recientemente se
En general los pacientes con causas y edad han realizado estudios en los que se demues-
favorables y encefalopatía en etapa I o II re- tra que la combinación de ambas medidas tie-
quieren de observación clínica, evitar las toxi- ne un mejor impacto en el tratamiento del pa-
nas adicionales, acceso venoso periférico para ciente con falla hepática aguda.
administrar una solución glucosada. Los pa-
cientes con enfermedad más severa, es decir
encefalopatía III o IV o que presenten deterioro TRATAMIENTO INTERDISCIPLINARIO
neurológico rápido en presencia de caracte-
rísticas desfavorables, requerirán vigilancia Toxicología. Acetaminofén: para los casos
más intensa de cada uno de los sistemas orgá- más severos se debe administrar N-acetil-
nicos disfuncionales. La inestabilidad hemodi- cisteína por vía intravenosa; sin embargo, en
námica necesita una carga apropiada de vo- Colombia no se dispone de esta presentación,
lumen y reanimación con líquidos con apoyo por lo cual se administra por vía enteral. En
vasopresor, además de canalización arterial algunos casos se ha administrado la presen-

766
CAPÍTULO XI: FALLA HEPÁTICA AGUDA

tación oral de N-acetilcisteína por vía ra hasta un estado de encefalopatía III-IV no


parenteral. puede proteger sus vías respiratorias para lo
cual requiere intubación orotraqueal.

EDEMA/HIPERTENSIÓN ENDOCRANEANA Entre los medicamentos se administra manitol


(1g/kg) en solución al 20 % intravenoso en
Debido a que la aparición de encefalopatía es forma de bolos siempre y cuando la osmolari-
un criterio diagnóstico de falla hepática agu- dad sea menor de 320 mosm/L. Los esteroides
da debe descartarse siempre que el trastorno no han demostrado tener efecto sobre la mor-
neurológico se deba a otra causa. A medida talidad o la disfunción neurológica. La prosta-
que la función hepática empeora aparece la ciclina aumenta el metabolismo cerebral sin
encefalopatía, sin embargo, lo que más pre- incrementar el flujo sanguíneo cerebral. Se
ocupa es la aparición del edema cerebral, de- emplean los barbitúricos (bolo de tiopental
bido a que la hernia cerebral es una causa sódico 3-5 mg/kg seguido de infusión conti-
principal de muerte en los pacientes no trata- nua a 3-5mg/kg/hora) en combinación con hi-
dos. Si la encefalopatía progresa hasta el es- potermia para disminuir la presión endocra-
tado III-IV es necesaria la monitorización de neana.
la presión intracranea. El objetivo es mantener
la presión endocraneana por debajo de 20 La hiperventilación reduce la presión de dió-
mmHg y la presión de perfusión cerebral de xido de carbono y el flujo sanguíneo cerebral
50 mmHg. con lo cual se disminuye la presión endocra-
neana, sin embargo, en la encefalopatía avan-
Es posible medir el consumo cerebral de oxí- zada la hiperventilación disminuye en forma
geno mediante la colocación de un catéter en severa el flujo sanguíneo y el consumo de
el bulbo yugular. Se calcula la diferencia del oxígeno cerebral y puede potenciar la apari-
contenido de oxígeno entre la sangre arterial ción de isquemia cerebral.
y la sangre venosa yugular; cuando la diferen-
cia es elevada indica isquemia cerebral.
ALTERACIONES CARDIOVASCULARES
La monitorización de la dinámica cerebral tie-
ne valor para orientar sobre los pacientes que A medida que la función hepática se deterio-
se beneficiarán con el transplante y los que ra, se presenta vasodilatación progresiva e
no son candidatos para éste, además pronos- hipotensión. Los pacientes que no pueden al-
tica la posibilidad de muerte cerebral durante canzar el estado hiperdinámico como respues-
el procedimiento. Debe tenerse en cuenta que ta a la injuria, tienen pocas probabilidades de
ninguno de los dispositivos mencionados es sobrevivir y generalmente fallecen debido a
más útil que las valoraciones clínicas repeti- sepsis. El objetivo debe ser optimizar el volu-
das en los pacientes conscientes. men circulatorio, aunque se puede requerir de
un catéter arterial pulmonar para orientar el
En los pacientes con encefalopatía I y II se tratamiento cuando coexisten insuficiencia
deben evitar los sedantes Es también muy renal progresiva y edema pulmonar. Si el pa-
importante que se encuentre en un ambiente ciente sigue hipotenso se puede emplear
tranquilo, con cabecera elevada a 30° y que noradrenalina, para obtener una presión de
tenga valoraciones repetidas por observado- perfusión cerebral mayor a 60 mmHg, com-
res capacitados. Cuando el sujeto se deterio- binado con dopamina a dosis bajas.

767
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ALTERACIONES RESPIRATORIAS gestiva alta, aunque de todas formas está in-


dicada la endoscopia para descartar várices
Conforme progresa la enfermedad hepática esofágicas. Ocasionalmente se presenta pan-
hay hiperventilación y alcalosis respiratoria creatitis aguda en la falla hepática aguda y el
antes que acidosis respiratoria. Cuando el transplante sólo se debe retrasar si en la TAC
paciente se encuentra en etapa III de encefalo- se evidencia pancreatitis necrotizante.
patía hay riesgo de broncoaspiración y se hace
necesaria la intubación y el apoyo ventilatorio.
Para el tratamiento lo más recomendado es INFECCIÓN
el aumento de la FiO2 y no el PEEP porque
aumenta la congestión hepática, altera el gas- Debido a que en ocasiones las manifestacio-
to cardíaco, la transferencia de oxígeno lo que nes clínicas son muy escasas se recomienda
puede producir aumento de la presión realizar en forma rutinaria hemocultivos y culti-
endocraneana. vos de líquidos biológicos. Muchas veces el em-
peoramiento de la encefalopatía, una leuco-
citosis discreta sin fiebre o la aparición de in-
INSUFICIENCIA RENAL suficiencia renal sugieren que el paciente pue-
da tener un proceso infeccioso. En algunos
Luego del transplante hepático se restaura la centros se inicia profilaxis antibiótica contra
función renal normal, aunque es posible que bacilos Gramnegativos, gérmenes de origen
inicialmente se requiera de diálisis. entérico y Staphylococcus aureus y contra
Candida hasta que haya mejoría hepática. Se
administran antibióticos poco absorbibles por
ASPECTOS GASTROINTESTINALES vía oral como la norfloxacina (400 mg/12 h) con
nistatina (1 millón de U c/6h). Si se sospecha
La profilaxis con bloqueadores H2 y sucralfate infección se debe iniciar una cefalosporina de
ha disminuido la incidencia de hemorragia di- tercera gneraión asociada a un antifúngico.

Complicaciones Tratamiento
Edema cerebral Monitor extradural de presión si la encefalopatía es grado III-IV. Evitar maniobras que
aumenten la presión endocraneana. Reposo. Si la presión es mayor de 20 mm de Hg
aplicar manitol 1g/kg/ bolo, luego hemofiltración y plasmaféresis. Coma barbitúrico.
Falla renal Evitar la hipotensión, drogas nefrotóxicas, control de la infección. Dopamina 2-4 ug/kg/h.
Hemofiltración.
Infección bacteriana Buena higiene. Alto índice de sospecha. Cultivos diarios de sangre, orina y otros líquidos.
Antibioticoterapia empírica. Considerar descontaminación intestinal selectiva. Considerar
profilaxis antibiótica intravenosa.
Falla circulatoria Colocar catéter central y medir indicadores de hipoxia tisular con frecuencia. Evitar
vasoconstrictores. Considerar N-acetilcisteína.
Complicaciones Ranitidina o sucralfate. Plasma fresco congelado sólo en casos de sangrado y antes de
hemorrágicas procedimientos invasores.
Hipoglicemia. Medir glicemia cada hora.Solución de glucosa hipertónica.

Tomado de Mas A, Rodés J. Fulminant hepatic failure. Lancet 1997; 349:1081-85.

768
CAPÍTULO XI: FALLA HEPÁTICA AGUDA

TRANSPLANTE HEPÁTICO te como candidatos para el transplante de hí-


gado, porque cualquier demora puede hacer
El único tratamiento eficaz que existe hasta que el paciente se complique aún más y con
ahora es el transplante de hígado; sin embar- esto se elevan las tasas de morbimortalidad.
go, hay que escoger muy bien a los pacientes
que lo van a recibir: es obvio que no se realizará Existen varias técnicas para realizar el trans-
a un sujeto que se recuperará sólo con las me- plante de hígado; la preferida para los pacien-
didas de sostén. Asímismo, los pacientes con tes que no tienen posibilidades de recuperar-
gran riesgo deben ser valorados inmediatamen- se es la ortotópica.

Indicaciones para transplante hepático cuando la causa es


diferente a intoxicación por acetaminofén
Encefalopatía estado III.
Empeoramiento de la encefalopatía luego de mejoría inicial.
Encefalopatía estado I-II sin mejoría luego de 72 horas de tratamiento en
curso subagudo.

Contraindicaciones del transplante hepático


Lesiones malignas extrahepáticas.
Sepsis no controlada.
Lesión cerebral irreversible causada por hemorragia intracraneal.
Edema cerebral que no responde a tratamiento.

PRONÓSTICO con edad menor de 30 años o menor de 30%


con edad mayor de 30 años.
Se han identificado diversas variables de im-
portancia pronóstica y se han formado crite- Criterios del King´s College Hospital: fue-
rios pronósticos. ron publicados en 1989 y se obtuvieron me-
diante análisis retrospectivo de 558 pacien-
Criterios de Clichy: lo formularon un grupo tes que se trataron en este hospital londinense
de investigadores franceses valorando facto- y recibieron validación en otra cohorte de 175
res pronóstico de 115 pacientes con falla he- pacientes. Sirven esencialmente para pronos-
pática aguda. Observaron que eran factores ticar la mortalidad y son:
pronósticos independientes de la superviven-
cia, por análisis multivariado, la concentración A. Individuos que ingirieron acetaminofén:
del factor V, edad del individuo, ausencia de • pH menor de 7,3 (independiente del gra-
antígeno de superficie de HBV y concentra- do de encefalopatía).
ción sérica de a-fetoproteína. La mortalidad • TPT mayor a 100 segundos o INR >6,5
fue particularmente alta en los pacientes que y concentración de creatinina sérica>3,4
presentaban coma o confusión y que tenían mg/dl en pacientes con encefalopatía III
una concentración de factor V menor de 20% o IV.

769
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

B. Sin ingestión de acetaminofén: LECTURAS RECOMENDADAS


• TPT mayor a 100 segundos o INR >6,5
(independiente del grado de encefalo- 1. Awad SS, Swaniker F. Results of a phase I trial
patía). evaluating a liver support device utilizing albumin
O tres de las siguientes variables: dialysis. Surgery 2001; 130:354-362.
2. Azoulay D, Samuel D. Auxiliary partial orthotopic
• Edad menor de 10 o mayor de 40 años.
vs standard orthotopic whole liver transplantation
• Causas: hepatitis no A no B, halotano, for acute liver failure: a repraisal from a single
hepatitis de otro tipo, reacciones farma- center by a case-control study. Ann Surg 2001;
cológicas idiosincráticas. 234:723-731.
• Duración de la ictericia mayor a 7 días 3. Bernal W, Donaldson N. Blood lactate as an early
antes de iniciarse la encefalopatía. predictor of outcome in paracetamol-induced acute
• TPT mayor a 50 segundos, INR >3,5. liver failure: a cohort study. Lancet 2002; 359: 558-
• Concentración sérica de bilirrubina > 563.
4. Bernstein D, Tripodi J. Fulminant hepatic failure.
17,5 mg/dL.
Crit Care Clinics 1998;14:181-197.
5. Clemmesen JO, Kondruo J. Effects of high volume
Lactato sérico: otros estudios han utilizado plasmapheresis on amonia, urea and aminoacids
la concentración de lactato sérico como indi- in patients with acute liver failure. Am J
cador pronóstico en intoxicación por acetami- Gastroenterol 2001; 96:1217-1223.
nofén, encontrando que un valor de 3,5 mmol/ 6. Ikegami T, Shiotani S, Ninomiya M, et al. Auxiliary
L tiene una sensibilidad de predicción de muer- partial orthotopic liver transplantation from living
te de 67% y una especificidad de 95%. Un donors. Surgery. 2002; 131:205S-210S.
7. Jalan R, Damink SW. Moderate hypothermia for
valor de 3,0 mmol/L luego de la reanimación
uncontrolled intracranial hypertension in acute liver
con líquidos endovenosos tiene una sensibili- failure. Lancet 1999; 354:1164-1168.
dad de 76% y una especificidad de 97%. 8. Kelly DA. Managing liver failure. Postgrad Med J
2002; 78:660-667.
Si se combinan ambos criterios la sensibili- 9. Kjaergard LL, Liu J, Als-Nielsen B, et al. Artificial
dad asciende a 91%. and bioartificial support systems for acute and
acute-on-chronic liver failure: a systematic review.
La concentración de lactato arterial mayor de JAMA 2003; 289:217-222.
10. Kobayashi N, Fujiwara T. Prevention of acute liver
3,5 mmol/L luego de una reanimación tempra-
failure in rats with reversibly inmortalized human
na con líquidos endovenosos es una indica- hepatocytes. Science 2000; 287 :1258-1262.
ción de trasplante hepático. 11. Mas A, Rodés J. Fulminant hepatic failure. Lancet
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Histología hepática: es de mal pronóstico la 12. Rodríguez MR. Enzimas hepáticas elevadas. En-
necrosis de más de 50% del parénquima he- foque diagnostico. Rev Col Gastroenterol 1998;
pático; sin embargo la utilidad de la biopsia 13:25-30.
hepática es limitada por el riesgo de hemorra- 13. Sadahiro T, Hirasawa H. Usefulness of plasma
exchange plus continuous hemodiafiltration to re-
gia y la heterogeneidad de los cambios pato-
duce adverse effects associated with plasma
lógicos. Es útil para descartar la presencia de exchange in patients with acute liver failure. Crit
hepatopatía crónica. Care Med 2001; 29:1386-1392.
14. Walsh TS, Wigmore SJ. Energy expenditure in
acetaminophen-induced fulminant hepatic failure.
Crit Care Med 2000; 28:649-654.

770
Paciente con ictericia,
alteración del estado mental,
TP prolongado

Evaluar grado de encefalopatía, considerar flumazenil 1


mg IV, glicemia, electrolitos, gases arteriales, cuadro
hemático, pruebas de función renal, considerar cultivo.
Sí Tratar enfermedad base
No Enfermedad hepática
preexistente
Cabecera a 30°, cabeza semiflexionada, evitar
hipervolemia, restricción de estímulos externos Acetaminofén N-acetilcisteína
sensoriales, Lactulosa VO o por SNG, glicemia Causa
horaria, electrolitos, cultivos, Rx tórax, gases identificable
arteriales, evitar hipertermia, infusión de glucosa Amanita Forzar diuresis, penicilina G,
hipertónica, norfloxacina 400 mg/12 h, nistatina aspiración duodenal Dieta hipoproteica
1mill U/6h

Sensor de presión intracraneal, sedación con benzodiacepina o


propofol, intubación orotraqueal, monitoreo de presiones pul- Encefalopatía III, IV Encefalopatía I y II
monares, catéter de Swan-Ganz, control de líquidos administrados/
eliminados, vasopresores si hay necesidad.

PIC >20 mm Hg Infección Hemorragia Insuficiencia renal,


creatinina>4.5 mg/dl

Manitol 1 g/kg en 15-20 Cefalosporina de tercera Plasma fresco congelado


min, máximo 3 dosis /día generación más un antifúngico Evitar hipovolemia, hipotensión,
fármacos nefrotóxicos

Hemofiltración continua
Tiopental sódico 3-5 mg/kg bolo seguido de
Hemofiltración continua
infusión 3-5 mg/kg/hora, considerar hipotermia

771
CAPÍTULO XI: FALLA HEPÁTICA AGUDA
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XI

Encefalopatía hepática

Manuel Mojica Peñaranda, MD


Profesor titular de Gastroenterología
Universidad Libre, Barranquilla.
Vicepresidente Asociación Colombiana de Hepatología

Elisa Mojica Muñoz, MD


Hospital de Puerto Colombia
Puerto Colombia, Atlántico

DEFINICIÓN

E s un estado reversible de alteración en la


función cognitiva o de la conciencia que
ocurre en pacientes con enfermedad hepáti-
do para metabolizar sustancias neurotóxicas,
la mayoría de ellas procedentes del intestino.
La aparición de encefalopatía hepática es de
ca aguda o crónica o shunts porto-sistémicos. mal pronóstico en cualquier enfermedad he-
Siendo una alteración funcional neurotransmi- pática.
sora, no tiene sustrato anatomopatológico
concreto. Las manifestaciones son conse- En la cirrosis hepática la encefalopatía está
cuencia del trastorno en el sistema nervioso incluida dentro de la clasificación de Child-
central provocado por la incapacidad del híga- Pugh.

CLASIFICACIÓN DE CHILD-PUGH
Puntos

Encefalopatía auusente 1
I-II 2
III-IV 3
Ascitis ausente 1
leve 2
a tensión 3 A = 5-6
Bilirrubina 2 1
B = 7-9
(mg/dL) 2-3 2
>3 3 C = >10
Albúmina 3,5 1
(gr/dL) 2,8-3,5 2
2,8 3
Protrobina 50 1
(%) 30-50 2
<30 3
Adaptado de Ghany M, Hiifnagle H. Aproach to the patient with liver disease. En: Harrison´s Principles of Internal Medicine 15° Ed.
Braunwald F, Fauci A, Kasper D (eds) Mc Graw Hill. New York, 2001.

772
CAPÍTULO XII: ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA

EPIDEMIOLOGÍA FISIOPATOLOGÍA
La mayoría de los casos de encefalopatía Actualmente se considera un trastorno multi-
hepática ocurre en pacientes cirróticos, y me- factorial y no existe una teoría única que expli-
nos de 5% se presenta en pacientes no cirró- que los hallazgos. La reversibilidad de la ence-
ticos. La combinación de encefalopatía hepá- falopatía hepática y la ausencia de alteracio-
tica y hemorragia de vías digestivas es de muy nes morfológicas neuronales sugieren que se
mal pronóstico. trata de un trastorno metabólico. Los elemen-
tos fundamentales parecen ser las toxinas pro-
Luego del primer episodio de encefalopatía venientes del intestino que pasan a la circula-
hepática debida a cirrosis la supervivencia es ción general. El principal factor es el amonía-
de 42% a un año y de 23% a tres años, por lo co; sin embargo, 10-20% de los pacientes con
cual se debe considerar el trasplante hepático. encefalopatía hepática tienen niveles sanguí-
neos normales de amoníaco, lo que sugiere
que no es el único mecanismo responsable.

EVIDENCIAS A FAVOR DEL PAPEL DEL AMONÍACO EN LA ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA


El amoníaco está aumentado en el 80-90% de los pacientes con encefalopatía hepática.
Los compuestos nitrogenados inducen encefalopatía hepática en pacientes con cirrosis o shunts
portosistémicos.
La glutamina en el LCR, derivada del metabolismo astrocitario del amoníaco, está aumentada
en prácticamente todos los pacientes con encefalopatía hepática.
En pacientes con errores congénitos en el ciclo de la úrea, los niveles elevados de amoníaco se
asocian con encefalopatía y los tratamientos dirigidos a prevenir/reducir el amoníaco además
previenen/mejoran la encefalopatía.
Los tratamientos dirigidos a reducir la llegada de amoníaco y otras sustancias nitrogenadas al
sistema nervioso central benefician a los pacientes con tendencia a la encefalopatía hepática.
Se han descrito múltiples mecanismos para la neurotoxicidad del amoníaco.
Tomado de: J. González-Abraldes, A. Mas. Encefalopatía hepática, patogenia y formas clínicas. Medicine 2000; 8(10): 508-15.

Las sustancias nitrogenadas proceden de la táneos, quirúrgicos o por la implantación de


digestión intestinal y se generan por acción una DPPI (Derivación Porto-sistémica Percu-
de las bacterias de la flora local sobre las pro- tánea Intrahepática o TIPS), existe deterioro
teínas de la dieta; otra parte viene de la muco- de la función hepatocelular y se disminuye la
sa intestinal, que utiliza la glutamina como depuración del amoníaco. Por lo tanto, éste
fuente de energía y su metabolito es el amo- llega al cerebro sin haber sido depurado por
níaco. Luego el amoníaco va por la circula- el hígado, y con fácil acceso, pues la barrera
ción portal y normalmente es metabolizado en hematoencefálica tiene una permeabilidad
el hígado a través del ciclo de la úrea, la cual anormal, todo lo cual resulta en la aparición
es eliminada por el riñón. En los pacientes que de los signos característicos de la encefalo-
tienen shunts porto-sistémicos ya sea espon- patía hepática.

773
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En el sistema nervioso central, el amoníaco ac- ren que la encefalopatía hepática es el resul-
túa en varias formas: altera el metabolismo ener- tado de una disfunción astrocitaria.
gético cerebral y la formación de potenciales de
acción en la membrana postsináptica, interrum-
pe la recaptación en la hendidura sináptica CUADRO CLÍNICO
astrocitaria del glutamato. También se observa
un aumento en la neurotransmisión mediada por Las alteraciones afectan el comportamiento,
GABAérgica, que es el principal mecanismo personalidad, inteligencia, neuromotricidad y
inhibidor del sistema nervioso central. nivel de conciencia. La encefalopatía hepáti-
ca se clasifica en encefalopatía aguda, cróni-
ca y subclínica. La forma aguda es el resulta-
ANATOMÍA PATOLÓGICA do de un brusco e intenso deterioro de la fun-
ción hepática, como sucede en la falla hepáti-
En la encefalopatía hepática se evidencia au- ca aguda, cirrosis y/o derivación porto-sisté-
mento del tamaño de los astrocitos con nú- mica. Los principales factores desencadenan-
cleos edematosos y nucleólos prominentes, tes son la hemorragia digestiva, las infeccio-
lo que se denomina degeneración astrocitaria nes, la insuficiencia renal, la hipocalemia y el
de Alzheimer tipo II. Estos hallazgos, junto con uso de sedantes. Generalmente mejoran al
las alteraciones de la neurotransmisión, sugie- corregir el factor precipitante.

Factores precipitantes Mecanismo de acción Estudio


Hemorragia de vías digestivas Aumento en la producción de amoníaco intestinal Análisis de heces y/o colocación
(várices gastroesofágicas, por la digestión de la sangre intraluminal de sonda nasogástrica
erosiones gastroduodenales)
Infecciones (peritonitis bacte- El aumento del catabolismo tisular supone una Cultivos de fluídos corporales,
riana espontánea, infección carga endógena de nitrógeno que provoca un especialmente en la ascitis
urinaria, infección respiratoria) aumento del amoníaco y puede causar insuficiencia
renal prerrenal.
Insuficiencia renal Disminuye la eliminación de productos nitrogenados, Química sanguínea
aumento de secreción digestiva de úrea, que es
degradada en el intestino produciéndose amoníaco
Desequilibrios hidroelec- La alcalosis metabólica favorece el paso de amoníaco Química sanguínea
trolíticos (diuréticos, vómito, a través de la barrera hematoencefálica. La hipoca-
diarrea) lemia favorece la producción renal de amoníaco.
Sedantes (benzodiazepinas, Niveles anormalmente altos por alteración del me- Uroanálisis para benzodiazepinas,
barbitúricos, analgésicos) tabolismo hepático; en el caso de las benzodiaze- narcóticos y otra sedantes
pinas sensibilidad exagerada por hiperactividad
GABAérgica
Estreñimiento El tránsito intestinal lento deja más tiempo para que Historia clínica
las bacterias actúen sobre los sustratos nitrogenados
de la dieta y se produzca y absorba más cantidad
de amoníaco
Exceso de proteínas en la dieta Aumento de la producción de amoníaco en el intestino Historia clínica

774
CAPÍTULO XII: ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA

Las manifestaciones clínicas son de dos cla- ciones neuromusculares consisten en asterixis
ses: alteraciones neuropsiquiátricas y altera- y signos piramidales (paresia, hiperreflexia,
ciones neuromusculares. Las primeras son las clonus y signo de Babinski), los cuales pue-
de un síndrome confusional, y pueden desa- den ser unilaterales y complican el diagnósti-
rrollarse en forma rápida o lenta. Las altera- co diferencial.

Cambios en el estado mental Alteraciones neuromusculares


Grado I Bradipsiquia, inversión del ciclo de sueño, disminución Incoordinación motora, alteraciones en la escritura
de la atención, irritabilidad
Grado II Somnolencia, desorientación, alteraciones de la perso- Asterixis, disartria, ataxia
onalidad, comportamiento inapropiado
Grado III Estupor, amnesia, desconexión del medio, habla incom- Asterixis más intensa
prensible
Grado IV Coma Hiperreflexia, signo de Babinski, posturas de des-
cerebración

Tomado de: J. González-Abraldes, A. Mas. Encefalopatía hepática, patogenia y formas clínicas. Medicine 2000; 8(10): 508-15.

DIAGNÓSTICO Existen clasificaciones más complejas en las


que se valora la intensidad de la asterixis, las
El diagnóstico se logra al reunir varios signos alteraciones en el electroencefalograma, el
clínicos como: estado mental, el nivel de amonemia y la prue-
ba de conexión numérica, que se usa principal-
• Alteraciones del estado mental: sirve para mente para monitorizar los pacientes incluidos
graduar el estado de encefalopatía hepática. en estudios clínico-terapéuticos. La resonan-
• Asterixis: no es específico de encefalopatía cia magnética nuclear, resonancia magnética
hepática, no suele estar presente en las espectroscópica o la tomografía por emisión
fases más avanzadas de la enfermedad, de positrones no se incluyen dentro de la va-
es el signo más importante que revela la loración clínica habitual, y las dos últimas no
alteración neuromotriz. se encuentran disponibles en nuestro medio.
• Fetor hepático: es un olor dulzón peculiar
en el aliento de algunos pacientes con en-
cefalopatía hepática, no se correlaciona AYUDAS DIAGNÓSTICAS
con la intensidad de la misma, es incons-
tante y difícil de definir. El diagnóstico de encefalopatía es clínico; los
• Trazados electrofisiológicos: se evidencia exámenes complementarios se utilizan para
lentificación del ritmo y su intensidad se apoyar un diagnóstico dudoso, graduar en for-
correlaciona con el estado clínico; también ma objetiva la encefalopatía y la respuesta al
muestra alargamiento de latencias y modi- tratamiento, detectar pacientes con encefalo-
ficaciones en las ondas de los potenciales patía subclínica y en el diagnóstico diferencial.
evocados.

775
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La amonemia puede ser útil para apoyar el falopatía. Hay lentificación difusa del trazado,
diagnóstico de encefalopatía hepática en pa- que de ritmo alfa normal de 8-13 ciclos/seg
cientes en los que haya dudas; en 80-90% de pasa a ritmo theta de 5-7 ciclos/seg y en las
los casos se encuentra elevada. Se determina fases más avanzadas a ondas delta de ma-
en sangre arterial, aunque también se puede yor amplitud y menor frecuencia.
hacer con sangre del lobulillo de la oreja. No
sirve hacer mediciones seriadas, pues los ni- Para el diagnóstico de la encefalopatía subclí-
veles no se correlacionan con el grado de nica se han utilizado los potenciales evocados,
encefalopatía. que es el registro de la actividad eléctrica que
se genera como respuesta a un estímulo vi-
Las alteraciones del electroencefalograma no sual, auditivo o somatosensitivo. También se
son específicas de encefalopatía hepática pe- han usado pruebas psicométricas. Las neuro-
ro pueden ser de ayuda. Existe correlación en- imágenes se utilizan sobre todo para excluir
tre las alteraciones y la severidad de la ence- otros diagnósticos.

PRINCIPALES DIAGNÓSTICOS DIFERENCIALES DE ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA

Signos de sospecha Prueba diagnóstica


Lesiones intracraneales Signos neurológicos de focalización, antece- TAC/RMN
(hematoma subdural, abscesos, dentes de traumatismo para el hematoma
ACV y tumores) subdural
Infecciones (meningitis) Fiebre y leucocitosis Punción lumbar
Otras encefalopatías metabólicas Historia clínica Química y gases sanguíneos
(uremia, hipercapnia, hipoglice-
mia, desequilibrios electrolíticos)
Síndromes relacionados con el Alcoholismo y síndrome confusional. En ence- Alcoholemia, en encefalopatía de
alcoholismo (intoxicación aguda, falopatía de Wernicke ataxia y alteraciones Wernicke prueba terapéutica con
síndrome de abstinencia, ence- oculomotoras tiamina
falopatía de Wernicke)
Status no convulsivo - Electroencefalograma

Tomado de: González-Abraldes J, Mas A. Encefalopatía hepática, patogenia y formas clínicas. Medicine 2000; 8(10): 508-15.

TRATAMIENTO
Los objetivos principales del tratamiento de la b) A nivel hepático potenciar el metabolismo
encefalopatía hepática son: de las toxinas.
c) A nivel de la barrera hematoencefálica, dis-
a) En el intestino, disminuir la formación y el minuir el paso de amoníaco.
paso a la circulación de sustancias nitroge- d) A nivel cerebral contrarrestar las alteracio-
nadas intestinales en general y de amo- nes en los diferentes sistemas neurotrans-
níaco en particular. misores.

776
CAPÍTULO XII: ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA

Lo primero es disminuir o suspender las proteí- El paciente debe estar bien hidratado y perfun-
nas en la dieta (20 g/día). Se ha intentado ad- dido. Se administra zinc 600 mg/día, que es
ministrar preparados proteicos de origen ve- cofactor de dos de las cinco enzimas que in-
getal con 40-80 g de proteína diarios para tervienen en el ciclo de la úrea, y que disminu-
complementar el aporte disminuido de proteí- ye los niveles de amonemia con mejoría del
nas de origen animal. Cuando el paciente en- cuadro de encefalopatía.
tre en coma se debe suspender la dieta por
vía enteral e iniciar nutrición parenteral total. • Dieta: proteínas 0,5 g/kg/día, aporte caló-
rico mediante carbohidratos y lípidos. Si la
Los medicamentos más usados son la lactulo- encefalopatía hepática no se resuelve en
sa y el lactitol por vía oral, disacáridos sintéti- 24-48 horas, se debe dar proteínas 0,8-1
cos no absorbibles que son fermentados por g/kg/día. La dieta libre de proteínas sólo
la flora intestinal, lo cual produce disminución está indicada si se prevé que el cuadro se
del pH local y disminución de la producción y resuelve en pocas horas (estreñimiento,
reabsorción del amoníaco. Se deben mante- sedantes).
ner luego de haberse resuelto el cuadro de
encefalopatía. Algunos efectos secundarios de • Lactulosa: por vía oral o sonda nasogástri-
los disacáridos son flatulencia, diarrea, náu- ca, 60-80 g divididos en 3 ó 4 dosis; tam-
seas y dolor abdominal. Por el sabor, la lactu- bién se puede usar en enemas con 200 g
losa es menos tolerada que el lactitol. de lactulosa en 700 mL de agua para apli-
car cada 8-12 horas con sonda Foley a fin
Se administran antibióticos poco absorbibles que de prolongar el tiempo de retención. Se
destruyen las bacterias proteolíticas y como pueden unir ambas formas en casos avan-
consecuencia disminuyen la formación de deri- zados de encefalopatía hepática y en he-
vados nitrogenados. Se prefieren la neomicina morragia de vías digestivas.
o la paraneomicina. La neomicina, que es tan
eficaz como la lactulosa en el tratamiento de la • Lactitol: 60-80 g por vía oral en 3-4 dosis,
encefalopatía hepática, se prescribe en dosis o en enemas. El objetivo es que el pacien-
de 2-4 gr/día. El metronidazol es tan eficaz como te presente 2-3 deposiciones pastosas al
la neomicina, en dosis de 800 mg/día. día sin que sean diarreicas.

TRATAMIENTO Y MECANISMOS DE ACCIÓN

Acción a nivel intestinal, disminuyendo la producción Dieta hipoproteica, disacáridos no absorbibles (lactulosa,
de neurotoxinas y su paso a la circulación sistémica lactitol), antibióticos no absorbibles
Acción a nivel hepático, potenciando el metabolismo Suplementos de zinc, formulaciones de ornitina-aspartato
del amoníaco
Acción a nivel de la barrera hematoencefálica dismi- Aminoácidos de cadena ramificada
nuyendo el acceso de neurotoxinas
Acción a nivel cerebral, contrarrestando las alteraciones Antagonistas de los receptores de benzodiazepinas
en los diferentes sistemas neurotransmisores (flumazenil)
Trasplante hepático

777
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO ESPECÍFICO La l-ornitina-l-aspartato se administra por vía


oral, 18 g/día en tres tomas; reduce en forma
Lo primero es diagnosticar y eliminar los facto- significativa la amonemia por el aumento de
res desencadenantes: desequilibrios hidro- la síntesis de úrea y glutamina.
electrolíticos, hemorragia, sepsis, suspensión
de diuréticos y sedantes. El bloqueo de los receptores GABA/benzodia-
cepina con flumazenil sólo debe usarse cuan-
Se ha planteado el tratamiento basado en la do se haya establecido que la encefalopatía
hipótesis de los “neurotransmisores falsos”, el es precipitada por la ingesta de benzodiace-
cual consiste en la administración intravenosa pinas. Existe una revisión Cochrane sobre el
de soluciones de aminoácidos ramificados (ra- flumazenil en encefalopatía hepática aguda y
cémicos) que ha mostrado efectos benéficos, crónica, la cual concluye que no tuvo efecto
aunque no se sabe si se debe incluir como ni en la recuperación neurológica ni en la su-
medida general o específica para mantener pervivencia; sin embargo, sí se vio efecto en
el estado nutricional del paciente. Los reque- la mejoría de la encefalopatía hepática a corto
rimientos energéticos son de 20-30 kcal/kg/ plazo en pacientes con pronóstico favorable.
día, según el estado metabólico del sujeto.
El tratamiento quirúrgico en los pacientes cirró-
También se ha administrado benzoato sódico ticos con encefalopatía crónica y deterioro
10 g/día, el cual se combina con el amoníaco progresivo de la condición clínica, es el tras-
para formar ácido hiperúrico y con la glutamina plante hepático. Luego del primer evento de
para forma fenilglutamina, que son elimina- encefalopatía hepática aguda, se deben ini-
dos en la orina. Produce disminución de la ciar los estudios pretrasplante.
amonemia, eludiendo el ciclo de la úrea. Es
tan efectivo como la lactulosa y no tiene efec-
tos colaterales específicos.

FACTORES PRECIPITANTES DE ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA Y SUS TRATAMIENTOS ESPECÍFICOS

Factores precipitantes Tratamiento


Hemorragia digestiva Aspiración de restos hemáticos por sonda nasogástrica, disacáridos no absorbibles, desconta-
minación intestinal
Infecciones Antibioticoterapia según foco, por lo general cefalosporinas de tercera generación
Insuficiencia renal Tratar el factor desencadenante (retirar AINEs, ajustar dosis de diuréticos, etc)
Desequilibrios electro- Tratamiento del factor desencadenante y corregir según química sanguínea, retirar laxantes,
líticos (diuréticos, ajustar dosis de diuréticos
vómito, diarreas)
Sedantes Retirar benzodiazepinas u otros sedantes, administración de flumazenil
Estreñimiento Acentuar tratamiento con disacáridos no absorbibles incluyendo su administración mediante
enemas
Dieta hiperproteica Dieta hipoproteica

778
CAPÍTULO XII: ENCEFALOPATÍA HEPÁTICA

PRONÓSTICO cephalopathy. Am J Gastroenterol 2000; 95:2029-


2034.
El pronóstico depende de la causa desencade- 9. Haussinger D. Pathogenesis and treatment of
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prognostic significance of subclinical hepatic en- ción Colombiana de Hepatología. Bogotá, 2001.

779
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIII

Absceso hepático

Manuel Mojica Peñaranda, MD


Profesor titular de Gastroenterología,
Universidad Libre, Barranquilla.
Vicepresidente Asociación Colombiana de Hepatología.

Elisa Mojica Muñoz


Hospital de Puerto Colombia
Puerto Colombia, Atlántico

E l hígado es el órgano extraintestinal que


se afecta con más frecuencia en la ame-
biasis y el absceso es la complicación más
FISIOPATOLOGÍA
La infección se adquiere al ingerir los quistes
importante. de Entamoeba histolytica por vía fecal-oral.
El humano es el principal reservorio, y la ma-
yor fuente de infección son los portadores cró-
EPIDEMIOLOGÍA nicos o asintomáticos. Los quistes llegan al
cuerpo a través del agua, vegetales o comida
Cerca del 10% de la población mundial se en- contaminada con heces, resisten la degrada-
cuentra infectada por Entamoeba histolytica. ción en el estómago y pasan al intestino del-
Hay mayor prevalencia en las zonas tropica- gado donde ocurre la liberación de los trofo-
les y en áreas con condiciones sanitarias defi- zoítos; éstos pasan al intestino grueso, des-
cientes. Aparece en menos del 1% de los pa- de donde se produce la invasión.
cientes con amebiasis intestinal, y es más fre-
cuente en el género masculino en una propor- Cuando la E histolytica se encuentra en la
ción 10:1 con respecto al femenino. No se sa- pared intestinal, puede erosionar la muscularis
be por qué es más común en este género; se mucosa y perforar la serosa, lo que origina
piensa que la ingesta de alcohol (más de 150 peritonitis o una fístula entero-cutánea. Por la
g al día) altera la función de las células de erosión de los vasos sanguíneos de la pared
Kupffer y la respuesta inmunológica celular y intestinal, las amebas alcanzan la circulación
humoral. portal y se establecen en el hígado. La forma
infectante hepática es el trofozoíto.
Ocurre con mayor frecuencia entre la tercera
y quinta décadas de la vida. En el mundo, los La localización más frecuente es el lóbulo
países en donde más se reportan casos son derecho, donde, por lo general, se presenta
Méjico e India. como un absceso único. En el examen histo-
lógico se evidencia una lesión focal que pue-
de llegar a ocupar todo el lóbulo derecho, con
material espeso, de color marrón oscuro e ino-

780
CAPÍTULO XIII: ABSCESO HEPÁTICO

doro (a menos que presente sobreinfección La enfermedad se puede dividir en aguda, con
bacteriana) que corresponde a tejido hepáti- menos de 10 días de sintomatología, y cróni-
co necrosado y mezclado con sangre. ca con más de dos semanas de evolución
sintomática. La respuesta al manejo es simi-
lar tanto en la forma aguda como en la crónica.
DIAGNÓSTICO
Las complicaciones del absceso son sobrein-
CUADRO CLÍNICO fección, aumento de tamaño del órgano y rup-
tura hacia órganos vecinos. Si la ruptura se
Con frecuencia existe el antecedente de ame- produce hacia el diafragma y la cavidad pleu-
biasis intestinal o diarrea y sólo en una terce- ral, ocasiona empiema y fístulas; si es hacia
ra parte se encuentra Entamoeba histolytica el pericardio ocasiona pericarditis, especial-
en las heces en el momento del diagnóstico. mente si el absceso se encuentra en el lóbulo
La sintomatología puede aparecer en forma izquierdo. Dos tercios de las rupturas se ha-
insidiosa o abrupta. cen a la cavidad peritoneal y el tercio restante
a la cavidad torácica.
Los síntomas más importantes son dolor en
el cuadrante superior derecho, fiebre (38- Las amebas pueden alcanzar la circulación
39ºC), malestar general, astenia, adinamia y mayor y distribuirse por vía hematógena a
tos no productiva. El dolor puede ser sordo y cualquier órgano. Si hay compresión sobre el
constante o agudo y punzante, aumenta con árbol biliar, se observa ictericia obstructiva.
la respiración y la tos y se puede propagar al
hombro derecho cuando hay compromiso dia- AYUDAS DIAGNÓSTICAS
fragmático. En el examen físico se encuentra
hepatomegalia dolorosa y dolor puntual a la Las pruebas serológicas son positivas en más
palpación intercostal o subcostal. No es fre- de 90% de los casos, especialmente la hemo-
cuente la aparición de ictericia. Puede existir aglutinación indirecta. Son útiles también la
distensión abdominal con irritación peritoneal. técnica de ELISA y PCR (reacción en cadena
de la polimerasa) que facilita la identificación
En el examen pulmonar se puede encontrar de ADN de la E. histolytica patógena. Las li-
disminución del murmullo vesicular en la base mitaciones de estas pruebas son la demora
derecha o signos de derrame pleural. Los rui- en la entrega de resultados y la imposibilidad
dos cardíacos son normales, excepto por ta- de diferenciar entre infección actual o estado
quicardia, a menos que exista compromiso de portador.
pericárdico.
La ecografía, la tomografía axial computado-
Puede haber leucocitosis con desviación a la rizada (TAC) y la resonancia nuclear magnéti-
izquierda, anemia con hematocrito menor de ca (RMN) permiten localizar y delimitar el abs-
35%. Las pruebas hepáticas pueden estar al- ceso con bastante precisión; en general tienen
teradas, por ejemplo la albúmina, el tiempo una sensibilidad para absceso hepático
de protrombina, la fosfatasa alcalina, la AST y amebiano superior al 95%.
las bilirrubinas, aunque estas alteraciones son
más frecuentes en el absceso piógeno. El primer examen que se debe realizar es la
ecografía, debido a su menor costo, facilidad
de acceso y carácter no invasor.

781
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La TAC es especialmente útil para detectar TRATAMIENTO


lesiones pequeñas. Si se hace con medio de
contraste intravenoso es posible establecer el El tratamiento del absceso hepático amebiano
diagnóstico diferencial con quiste hepático, no complicado incluye medicamentos amebici-
hemangioma o tumor sólido. Las desventajas das y, en casos seleccionados, aspiración
de la TAC son el costo y la necesidad de me- percutánea o drenaje abierto del absceso. El
dio de contraste que puede inducir reaccio- medicamento de elección es el metronidazol,
nes alérgicas o falla renal. que resuelve el 90% de los abscesos hepáti-
cos amebianos no complicados. No se debe
La RMN es considerada la prueba más sensi- administrar a mujeres en el primer trimestre
ble para evidenciar lesiones hepáticas; sin de embarazo por sus efectos teratógenos se-
embargo, no permite diferenciar entre un abs- ñalados en animales experimentales. Se debe
ceso amebiano y uno piógeno. Sus desven- prescribir metronidazol 750 mg tres veces al
tajas, en nuestro país, son la difícil accesibili- día por diez días; la mejoría clínica se eviden-
dad y el alto costo. cia luego de tres días de tratamiento. Los efec-
tos secundarios incluyen náuseas, cefalea, sa-
La radiografía de tórax es anormal en aproxi- bor metálico, vómito, diarrea, insomnio, exan-
madamente 50% de los pacientes por reacción tema y, más raramente, convulsiones; también
inflamatoria en el lóbulo inferior derecho pul- ataxia y neuropatía periférica. Si luego de cin-
monar. Las imágenes de medicina nuclear con co días el paciente no ha respondido o no to-
Tecnecio-99 sirven para diferenciar el absce- lera el metronidazol, se puede sustituir o adi-
so amibiano del piógeno, ya que en el prime- cionar cloroquina base.
ro la lesión aparece “fría” o hipocaptante por-
que no contiene leucocitos en su interior, y en Luego de terminar el tratamiento con metroni-
el segundo aparece “caliente”, es decir que dazol se debe administrar furoato de diloxani-
capta el isótopo por los leucocitos que se en- da en dosis de 500 mg tres veces al día por
cuentran en la cavidad del absceso. 20 días, agente que actúa a nivel luminal; si
no se utiliza este medicamento, existe el ries-
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL go de recaída en 10% de los casos. Sus efec-
tos secundarios son náuseas, vómito, diarrea
Debe hacerse diagnóstico diferencial con y flatulencia.
piocolecistitis (“piocolecisto”), absceso hepá-
tico piógeno, absceso subfrénico, quiste hidatí- Se han usado otros amebicidas como tinida-
dico infectado, hepatitis viral o alcohólica, zol, y dihidroemetina. Si el absceso es de gran
apendicitis, pancreatitis. También deben ex- tamaño y no mejora en 72 horas, debe efec-
cluirse enfermedades pulmonares como neu- tuarse aspiración percutánea guiada por TAC
monía, derrame pleural, tromboembolismo o ecografía.
pulmonar y enfermedades malignas como car-
cinoma hepatocelular, linfoma o enfermedad
metastásica del hígado.

782
CAPÍTULO XIII: ABSCESO HEPÁTICO

MEDICAMENTOS UTILIZADOS EN EL TRATAMIENTO DEL ABSCESO HEPÁTICO AMEBIANO

Medicamento Dosis Efectos secundarios


Metronidazol 750 mg /8 horas por 10 días Anorexia, náusea, vómito, diarrea, malestar, sabor metálico.
Reacción disulfuram con el alcohol, convulsiones, neuropatía,
mareo, confusión irritabilidad
Secnidazol 500 mg/8 horas por 5 días Náusea, vómito, anorexia, sabor metálico, epigastralgia, reacción
disulfuram con el alcohol
Tinidazol 600 mg/12 horas o 800mg /8 Anorexia, náusea, vómito, diarrea, malestar, sabor metálico.
horas por 5 días Reacción disulfuram con el alcohol
Cloroquina base 600 mg /6 horas por 2 días, luego Anorexia, náusea, vómito, diarrea, dolor abdominal, retinopatía,
300 mg/6 horas por 14-21 días convulsiones, cefalea, hipotensión, cambios electrocardiográficos
Iodoquinol 650 mg /8 horas por 20 días Náusea, vómito, dolor abdominal, diarrea, aumento de la tiroides,
contraindicado en pacientes con daño hepático o sensibilidad al
las 8-hidroxiquinolonas
Paromomicina 500 mg/8 horas por 7 días Diarrea, epigastralgia
Furoato de 500 mg/8 horas por 10 días Flatulencia, náusea, vómito
diloxanida

TRATAMIENTO INTERDISCIPLINARIO miento: desaparición de la fiebre, dolor, anore-


xia, disminución de hepatomegalía y retorno
La aspiración terapéutica debe considerarse del recuento de leucocitos a límites normales.
en pacientes que presenten: En los estudios de imágenes, la cicatrización
demora entre 3 y 9 meses, por lo cual no es
• Alto riesgo de ruptura, es decir cavidad >5 necesario el seguimiento imagenológico en
cm de diámetro. pacientes con absceso hepático amibiano no
• Absceso del lóbulo izquierdo por su mayor complicado.
mortalidad y posibilidad de ruptura hacia
el peritoneo o el pericardio.
• Falla al tratamiento médico en 5-7 días.
FACTORES DE MAL PRONÓSTICO
En los últimos años la aspiración con aguja
guiada por imagen ha reemplazado al drena- Múltiples abscesos
je abierto. El drenaje quirúrgico sólo es nece- Volumen de la cavidad del absceso >500 ml
sario en caso de ruptura a la cavidad perito- Elevación del hemidiafragma derecho o
neal o si el tratamiento médico no es efectivo. derrame pleural en radiografía de tórax
Encefalopatía
Bilirrubina >3,5 mg/dL
PRONÓSTICO Hemoglobina <8 g/dL
Albúmina <2 g/dL
En la mayoría de los casos se registra una Diabetes mellitus
mejoría clínica rápida luego del inicio del trata-

783
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN crobianos. El foco primario de infección pue-


de ser:
No existen fármacos profilácticos para la ami-
biasis. Las medidas de control deben ser el Biliar: las vías biliares extrahepáticas causan
adecuado lavado de manos después de la de- la infección por obstrucción por cálculo, cáncer
fecación, evitar las fuentes de contaminación o colangitis, con lo cual las bacterias se multi-
fecal, la depuración de las aguas residuales, plican y ascienden hacia la vía biliar intrahepá-
el control adecuado de excretas y el control tica. Varios estudios han demostrado un au-
del suministro de agua potable. Los quistes mento en la incidencia del absceso hepático
son resistentes al cloro, por lo que se reco- piógeno en pacientes con anastomosis cole-
mienda la desinfección con yodo. Los vegeta- docoduodenal, en comparación con los pacien-
les deben lavarse con detergente y luego ser tes en quienes realiza hepaticoyeyunostomía
embebidos en ácido acético o vinagre por 10- o coledocoyeyunostomía de Roux-en-Y.
15 minutos para erradicar los quistes; se debe
hervir el agua que se va a consumir. Portal: un proceso patológico como apendici-
tis, diverticulitis o enfermedad inflamatoria in-
En la población homosexual se debe evitar la testinal se transmite al hígado a través de la
transmisión oro-fecal modificando las prácti- circulación portal y se asocia con pileflebitis
cas sexuales. (tromboflebitis supurativa aguda de la porta).

Infección de estructura vecina: por ejemplo


ABSCESO HEPÁTICO PIÓGENO en la vesícula biliar que se extiende directa-
mente al hígado.
EPIDEMIOLOGÍA
Arteria hepática: los focos infecciosos pue-
Constituye tres cuartas partes de los absce- den estar en cualquier parte del organismo.
sos hepáticos en los países desarrollados. En
los Estados Unidos aproximadamente el 70- Trauma: la infección es consecuencia de trau-
80% de los abscesos hepáticos son piógenos, ma penetrante al hígado e incluso de trauma
5-10% son por sobreinfección, 5-10% son ami- contundente, ya que un hematoma intrahepá-
bianos y 10% de origen fúngico y por organis- tico sirve de medio de cultivo para las bacte-
mos oportunistas. rias. Es la causa de absceso hepático piógeno
en 4-15% de los casos.
En nuestro país, como en las naciones en de-
sarrollo, la incidencia del absceso piógeno Postrasplante: la incidencia de absceso he-
está en ascenso, aunque no alcanza a la del pático piógeno luego de trasplante ortotópico
absceso amibiano. es baja y generalmente se asocia con trombo-
sis de la arteria hepática, infección por citome-
galovirus y candida.
FISIOPATOLOGÍA
Los abscesos pueden ser únicos o múltiples;
Para que se desarrolle un absceso hepático generalmente los múltiples se asocian más
deben existir dos componentes: la presencia con un origen biliar y los únicos con un origen
del organismo y la vulnerabilidad del hígado. portal.
Generalmente los abscesos únicos son polimi-

784
CAPÍTULO XIII: ABSCESO HEPÁTICO

ORIGEN Y CAUSAS DEL ABSCESO HEPÁTICO PIÓGENO

Árbol biliar Colelitiasis, colangiocarcinoma


Vena porta Apendicitis, diverticulitis, enfermedad de Crohn
Arteria hepática Infección odontológica, endocarditis bacteriana
Extensión directa Piocolecisto, úlcera péptica perforada, absceso subfrénico
Trauma
Iatrogenia Biopsia hepática, stent biliar bloqueado
Criptogénico
Secundario a infección
de quiste hepático

Tomado de Krige JE, Beckingham IJ. ABC of diseases of liver, pancreas, and biliary system. Liver abscesses and hydatid disease.
BMJ 2001; 322:537-540.

ETIOLOGÍA rante esta etapa. Al resolverse la neutropenia


se pueden observar en la TAC numerosos
La mayoría de los abscesos piógenos son poli- microabscesos en el hígado, bazo y riñón.
microbianos con presencia de Gram negativos
aerobios y anaerobios de origen intestinal,
siendo los más comunes Escherichia coli, DIAGNÓSTICO
Klebsiella pneumoniae, Enterococo sp. Tam-
bién se cultivan Gram positivos anaerobios co- CUADRO CLÍNICO
mo Bacteroides sp, Fusobacterium sp. y Acti-
nomices sp. Si se evidencian Escherichia coli La presentación clásica es dolor abdominal,
y Klebsiella pneumoniae, la vía de acceso al fiebre, diaforesis nocturna, vómito, anorexia,
hígado es portal, mientras que si se cultivan malestar general y pérdida de peso. El cua-
anaerobios el origen es en la mayoría de los dro clínico puede presentarse en forma insi-
casos colónico. Klebsiella pneumoniae se aso- diosa u oculta en los pacientes ancianos o
cia en 53-65% de los casos con diabetes me- puede manifestarse primero el foco de infec-
llitus. Cuando el origen es odontológico o por ción (apendicitis). El absceso único es más
endocarditis bacteriana es más frecuente la difícil de identificar y por lo general es idiopáti-
infección por estafilococo. co, mientras que en los abscesos múltiples la
causa se identifica con mayor facilidad. Tam-
La inmunosupresión por SIDA, quimioterapia bién se puede manifestar como fiebre de ori-
o trasplante, sugiere origen fúngico u oportunis- gen desconocido en algunos pacientes libres
ta, posiblemente por colonización intestinal y de hepatomegalia o dolor abdominal.
diseminación portal hacia el hígado. El diagnós-
tico puede no sospecharse mientras el paciente Existe hepatomegalia en 50-70% de los casos,
se encuentre neutropénico, pues generalmente y la percusión empeora el dolor. Los abscesos
el único signo es la fiebre. Los hemocultivos y en el lóbulo derecho se asocian con tos y dolor
los estudios de radiología son negativos du- pleurítico que se propaga al hombro derecho.

785
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Dos tercios de los pacientes presentan leuco- buminemia y las transaminasas pueden estar
citosis, anemia y PCR positiva. La fosfatasa en el límite de la normalidad. Los hemocultivos
alcalina se encuentra aumentada, hay hipoal- son positivos en 50% de los pacientes.

COMPARACIÓN ENTRE ABSCESO HEPÁTICO AMEBIANO Y ABSCESO HEPÁTICO PIÓGENO

Amebiano Piógeno
Edad Menor de 40 Mayor de 50
Género Masculino 9-10:1 Igual
Raza Más de 90% de origen hispánico No predisposición
Dolor en cuadrante superior derecho 60-65% 30-40%
Fiebre 95-100% 95-100%
Escalofríos Menor 30% 75-80%
Serología positiva para E. histolytica 98-100% Menor de 5%
Número de abscesos Solitario en la mayoría (80%) de los casos Múltiples en 50%
crónicos y 50% de los casos agudos
Ubicación del absceso en el hígado Generalmente lóbulo derecho Generalmente lóbulo derecho
Viaje reciente o inmigrante de área Sí No
endémica
Diabetes mellitus En menos de 2% de los pacientes 15-27%
Ingesta de alcohol Sí Sí
Prurito, ictericia, bilirrubinas y AST Poco frecuente Frecuente
elevadas
Fosfatasa alcalina elevada Frecuente Frecuente
Hemocultivo positivo No Sí
Mortalidad Menor 5% 10-15%

AYUDAS DIAGNÓSTICAS tificar el agente etiológico; su sensibilidad es


de 85-95% y es especialmente útil en pacien-
La radiografía simple de abdomen puede mos- tes con contraindicaciones para uso de medio
trar hepatomegalia, con niveles hidroaéreos de contraste intravenoso y en pacientes en los
en la cavidad del absceso. El hemidiafragma que se sospeche enfermedad de la vía biliar.
derecho se encuentra elevado, puede existir
consolidación pulmonar, atelectasias basales La TAC es útil para identificar otras patologías
y derrame pleural. intraabdominales, tiene una mayor sensibili-
dad (95-100%) y es el método preferido para
El método imagenológico preferido es la eco- pacientes en postoperatorio que tienen la he-
grafía, que tiene bajo costo, no es invasora y rida quirúrgica abierta y para la realización de
se puede utilizar para aspirar el absceso e iden- drenajes.

786
CAPÍTULO XIII: ABSCESO HEPÁTICO

La CPRE (colangiopancreatografía endoscó- para buscar otros abscesos que no se hubie-


pica retrógrada) se utiliza para desobstruir la ran drenado. La cirugía es necesaria en los
vía biliar y colocar stents. Si no se identifica la abscesos hepáticos que son consecuencia de
causa del absceso hepático piógeno median- obstrucción biliar. El material drenado o aspi-
te ecografía o TAC, se pueden realizar estu- rado se envía para cultivo con antibiograma y
dios con bario, colonoscopia o CPRE. se debe modificar el tratamiento antibiótico
según el resultado. El drenaje con catéter per-
cutáneo tiene una tasa de éxito de 85-90%,
TRATAMIENTO con mínima mortalidad relacionada con el pro-
cedimiento, y es el método preferido de dre-
Los antibióticos deben iniciarse tan pronto se naje en el absceso hepático piógeno.
sospeche el diagnóstico.

El tratamiento empírico incluye antibióticos pa- PRONÓSTICO


renterales de amplio espectro como penicilina,
aminoglucósidos, metronidazol o clindamicina. El diagnóstico temprano con tratamiento anti-
En los pacientes ancianos y en renales cróni- biótico apropiado y drenaje ha reducido la mor-
cos se puede utilizar una cefalosporina de ter- talidad. Los factores de mal pronóstico inclu-
cera generación en vez del aminoglucósido. yen shock, SDRA, coagulación intravascular
Este régimen se debe modificar luego del re- diseminada, estados de inmunodeficiencia,
sultado de los cultivos. El tratamiento continúa hipoalbuminemia severa, diabetes, malignidad
por dos a cuatro semanas, dependiendo del y drenaje quirúrgico inefectivo. Anteriormente
número de abscesos, de la mejoría clínica y la mortalidad por absceso piógeno era de 24-
del potencial tóxico de los medicamentos se- 79% y en abscesos que no eran drenados has-
leccionados. ta de 100%. Las últimas series muestran tasas
de sobrevida de 88-100%, debido a la com-
TRATAMIENTO INTERDISCIPLINARIO binación de drenaje percutáneo, antibióticos y
a la capacidad de realizar diagnóstico más tem-
Los antibióticos como único tratamiento son prano gracias a las ayudas radiológicas.
efectivos en una minoría de los pacientes. La
mayoría requieren drenaje por catéter o aspi-
ración percutánea guiada por ecografía o TAC. LECTURAS RECOMENDADAS
1. Alvarez Pérez JA, González JJ, Baldonedo RF, et
El drenaje se debe realizar después de uno o al. Clinical course, treatment, and multivariate
dos días de tratamiento antibiótico intravenoso, analysis of risk factors for pyogenic liver abscess.
durante los cuales se evalúa la respuesta del Am J Surg 2001; 181:177-186.
paciente y se identifican las posibles causas. 2. Dharmarajan TS, Tankala H, Ahmed S, et al.
Pyogenic liver abscess: a geriatric problem. J Am
La cirugía se recomienda en los pacientes que Geriatr Soc 2000; 48:1022-1023.
3. Filice C, Brunetti E, Bruno R, Crippa FG. Clinical
luego de dos semanas de tratamiento antibió-
management of hepatic abscesses in HIV patients.
tico y drenaje percutáneo no presentan mejo- Am J Gastroenterol 2000; 95:1092-1993.
ría y en los casos abscesos loculados. El abs- 4. Gabata T, Kadoya M, Matsui O, et al. Dynamic CT
ceso debe disminuir de tamaño luego del pri- of hepatic abscesses: significance of transient
mer drenaje o aspiración; si la fiebre persiste segmental enhancement. Am J Roentgenol
por 48 horas, se debe realizar TAC o ecografía 2001;176:675-679.

787
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

5. Hanna RM, Dahniya MH, Badr SS, et al. Percuta- 12. Oh MD, Lee K, Kim E, et al. Amoebic liver abscess
neous catheter drainage in drug-resistant amoebic in HIV-infected patients. AIDS 2000; 14:1872-1873.
liver abscess. Trop Med Int Health 2000; 5:578-581. 13. Patiño JF, Absceso hepático. En: Lecciones de
6. Haque R, Mollah NU, Ali IK, et al. Diagnosis of Cirugía. Por JF Patiño. Editorial Médica Paname-
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the TechLab Entamoeba histolytica II antigen 14. Petri A, Hohn J, Hodi Z, et al. Pyogenic liver
detection and antibody tests. J Clin Microbiol 2000; abscess - 20 years’ experience. Comparison of
38:3235-3239. results of treatment in two periods. Langenbecks
7. Hoffner RJ, Kilaghbian T, Esekogwu VI, et al. Arch Surg 2002; 387:27-31.
Common presentations of amebic liver abscess.
15. Schwartz SI. Hepatic resection for multiple
Ann Emerg Med 1999; 34: 351-355.
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abscess in patients with liver cirrhosis: a nationwide Hepatol 2000; 33:853- 856.
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11. Nattakom S, Serrato P, Bright T, et al. Amebic liver abscess: retrospective analysis of 80 cases over
abscesses masquerading as pyemic abscesses. a 10-year period. J Gastroenterol Hepatol 2002;
Clin Infect Dis 2001; 33:145-147. 7:1001-1007.

788
CAPÍTULO XIV: PANCREATITIS AGUDA

CAPÍTULO XIII

Pancreatitis aguda

Gustavo A. Quintero, MD, MSc, FACS, FRCS


Servicio de Cirugía Hepatobiliar y Trasplantes
Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Jefe Honorario, Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a pancreatitis aguda es una enfermedad


inflamatoria común de naturaleza no bac-
teriana, causada por la activación, liberación
• Seudoquistes agudos.
• Necrosis pancreática (infectada o estéril).
• Absceso pancreático.
intersticial y autodigestión del páncreas por
sus propias enzimas, una entidad que motiva La pancreatitis aguda se caracteriza por un
un número significativo de consultas a los ser- cuadro de dolor abdominal. Otras causas de
vicios de urgencias. La pancreatitis aguda se dolor abdominal deben ser excluidas. Aunque
presenta con frecuencia considerable en un por su especificidad, la lipasa es superior a la
hospital general, frecuencia que como cuadro amilasa, con la misma sensibilidad, en la prác-
abdominal agudo puede ser la segunda des- tica clínica la determinación más común es la
pués de la apendicitis aguda. amilasemia. Todo paciente con sospecha clíni-
ca de pancreatitis aguda debe tener determi-
La mayoría de los pacientes con pancreatitis nación de amilasa sérica (de ser posible la p-
aguda se recuperan rápidamente y en forma amilasa) para confirmar el diagnóstico clínico
total, no importa cual sea la causa y el trata- en el momento de la admisión, así como debe
miento. Entre el 5% y el 15% de los casos, la tener examen por ultrasonido de abdomen.
enfermedad toma un curso fulminante; de es-
tos pacientes, 20%-60% mueren o desarrollan En nuestra experiencia, 80% de las pancrea-
complicaciones que ponen en serio peligro la titis agudas son de origen biliar, 9% son de
vida. etiología alcohólica, 5,1% son causadas por
trauma, 4,0% por hipercalcemia, 1,3% por
El diagnóstico de pancreatitis aguda obedece ascaridiasis y 0,6% tienen diferentes etiolo-
a los criterios de la Clasificación de Atlanta gías. Este perfil etiológico posiblemente se
de las pancreatitis agudas, la cual establece aplica a otros centros y regiones de Colom-
las siguientes categorías. (Bradley III, 1993) bia. La etiología debe poderse identificar en
el 75-80% de los casos.
• Pancreatitis aguda severa.
• Pancreatitis aguda leve. El diagnóstico de pancreatitis biliar se esta-
• Colecciones líquidas agudas. blece por los siguientes criterios:

789
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

a) Ausencia de historia de alcoholismo cróni- En la admisión:


co o de ingestión abundante y reciente de 1) Edad >55 años
alcohol, y ausencia de historia de inges- 2) Leucocitos >16.000
tión de drogas o de enfermedad sistémica 3) Glicemia >200 mg/dL
asociada u otras entidades que puedan ser 4) LDH >350 UI/L
factores etiológicos. 5) AST (SGOT) >250 U Sigma Frankel %
b) Historia de enfermedad litiásica biliar.
c) Demostración de colelitiasis, coledocolitia- En el curso de las primeras 48 horas:
sis o colecistitis aguda o crónica, por imáge- 1) BUN >5 mg/dL
nes diagnósticas: radiografías simples de 2) PaO2 <60 mmHg
abdomen; ultrasonografía de abdomen su- 3) Descenso del Hcto >10%
perior, que es el estudio de preferencia; to- 4) Calcio <8 mg/dL
mografía computadorizada; colangio-pan- 5) Déficit base >4 mEq/
creatografía endoscópica retrógrada 6) Secuestro líquidos >6.000 mL
(CPER); colescintigrafía (HIDA); colangio-
grafía trans-parietohepática o colangioreso- La tomografía axial computadorizada (TAC)
nancia. La ultrasonografía constituye el también permite clasificar por grados la grave-
examen primario en la mayoría de los ca- dad del proceso inflamatorio y necrótico local,
sos, principalmente para descartar patolo- como ha sido descrito por Balthazar, y esta-
gía litiásica biliar; la visualización del pán- blecer la presencia de alteraciones adiciona-
creas generalmente se dificulta por la pre- les, tales como colecciones de líquido y absce-
sencia de aire en las asas intestinales. El sos, las cuales pueden requerir modalidades
procedimiento es muy operador-depen- especiales de tratamiento médico, quirúrgico
diente. o de radiología intervencionista (drenaje per-
d) Los siguientes criterios de Glasgow (Bla- cutáneo dirigido). Nuestra recomendación no
mey 1983) tienden a favorecer el diagnós- incluye la TAC como examen de rutina en esta-
tico de pancreatitis biliar: dios tempranos, sólo cuando haya dudas en
1) edad >55 años el diagnóstico, no se obtenga mejoría con el
2) sexo femenino tratamiento adecuado o se sospeche necrosis
3) bilirrubina >25 mmol/L pancreática.
4) amilasa >4.000 UI/L
5) fosfatasa alcalina >300 UI/L La pancreatitis severa necesita monitorización
6) alanina-aminotransferasa (GPT) >100 y tratamiento intensivo y aún así tiene morta-
UI/L aspartato-aminotransferasa lidad de 20 a 30%. La Proteína C-reactiva
(SGOT) >100 UI/L (PCR) tiene valor en la determinación de la
severidad de la enfermedad y en la medición
Una vez terminada la evaluación etiológica, de su resolución o reactivación.
debe clasificarse la severidad de la enferme-
dad. El índice de APACHE II mayor o igual a Establecido el diagnóstico de pancreatitis bi-
13 marca el límite entre severa y moderada. liar aguda, o bajo la sospecha fuerte de ésta,
se procede de inmediato a practicar colangio-
La gravedad de la pancreatitis aguda se de- resonancia. Si ésta es positiva para obstruc-
termina según los clásicos criterios o índices ción biliar, entonces:
de pronóstico de Ranson, descritos en 1974:

790
CAPÍTULO XIV: PANCREATITIS AGUDA

Se solicita endoscopia dentro de las primeras coledocotomía y uso de catéteres de Fogarty.


seis horas de evolución para identificar y ob- En pacientes en mal estado general o frente
servar el estado de la papila, establecer si hay a hallazgos de grave inflamación y necrosis
cálculos libres en el duodeno, realizar colan- pancreáticas, sólo se hace drenaje de la vía
giografía retrógrada (CPER) y obtener una biliar (coledocostomía, colecistostomía o am-
muestra de bilis para análisis microscópico, bos procedimientos) como paliativo temporal,
fisicoquímico y microbiológico. Si hay hallaz- diferiendo el procedimiento definitivo para más
gos confirmatorios de pancreatitis biliar agu- tarde, cuando el severo proceso de pancrea-
da, se procede con la esfinterotomía endoscó- titis haya cedido. Siempre hay que tener en
pica y la extracción de cálculos retenidos en cuenta, sin embargo, que el drenaje de la vía
el colédoco. biliar no es suficiente cuando existe un cálcu-
lo enclavado en la papila, condición que, a pe-
El procedimiento endoscópico debe ser reali- sar del drenaje de la vía biliar, puede hacer
zado bajo profilaxis antibiótica. Actualmente que el proceso autonecrótico del páncreas
se recomienda cefoxitina 1,0 g IV media hora continúe hasta llegar a pancreatitis hemorrá-
antes del procedimiento y 1 g. cuatro horas gica letal.
después.
Si en la operación se encuentra un proceso
En algunos casos de alto riesgo operatorio, y severo de necrosis pancreática, se recomien-
cuando se ha establecido el diagnóstico de da practicar laparotomía, necrosectomía y dre-
colecistitis aguda concomitante, se puede em- naje abierto, y en algunos casos abordaje por
prender, bajo anestesia local, la colecistos- vía posterior.
tomía percutánea como procedimiento de ra-
diología intervencionista. En las pancreatitis de etiología alcohólica y
de otras etiologías diferentes de enfermedad
Si la colangiografía endoscópica no es exitosa biliar o de ascariasis, se recomienda trata-
y persiste la sospecha fundamentada de cole- miento médico no intervencionista, con cui-
docolitiasis, se debe realizar colecistocolan- dadosa monitorización clínica, de laboratorio
giografía percutánea o colangiografía transpa- y de imágenes, especialmente TAC, y la apli-
rietohepática, procedimientos que también cación de los criterios de gravedad de Ranson,
requieren profilaxis antibiótica. APACHE II y proteína C reactiva como indica-
ción de pronóstico y para decisión sobre ad-
Si los procedimientos anteriores revelan obs- misión a unidad de cuidado intensivo. El tra-
trucción biliar persistente y manifiesta y no es tamiento se fundamenta en el soporte orgáni-
posible realizar esfinterotomía endoscópica, co: resucitación con líquidos adecuados (una
se procede con la intervención quirúrgica. La pancreatitis severa equivale a una quemadu-
operación que se realice debe ser aquella que ra del 30% de la superficie corporal), soporte
corrija la obstrucción biliar y logre la extracción nutricional parenteral en la mayoría de los ca-
de los cálculos con las menores maniobras sos graves, succión nasogástrica (sólo cuan-
quirúrgicas posibles: colecistectomía y coledo- do hay distensión, vómito o ambos), soporte
cotomía con exploración biliar; la esfintero- ventilatorio, hemodinámico y renal. Se ha reco-
plastia transduodenal se reserva, como proce- mendado la nutición enteral en los casos de
dimiento extremo, para aquellos casos, no fre- pancreatitis aguda leve (McClave et al 1997);
cuentes, de impactación de un cálculo en la esto queda al buen juicio del médico tratante,
ampolla que no pueda ser retirado mediante por cuanto una pancreatitis con frecuencia se

791
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

acompaña de distensión, íleo e intolerancia a 3. Si la pancreatitis es severa, debe tratarse


la alimentación. Nuestra recomendación es en la unidad de cuidado intensivo.
mantener nutrición parenteral hasta cuando
el paciente esté asintomático y la amilasemia 4. La mayoría de las causas de pancreatitis
haya regresado a niveles normales; en este aguda en Colombia son de origen biliar.
momento el paciente puede iniciar la vía oral. Ante la sospecha de pancreatitis biliar de-
ben tenerse en cuenta los criterios de
En pacientes con pancreatitis aguda severa Glasgow y practicar colangio-resonancia.
que no mejoran con el tratamiento médico
adecuado o tienen signos clínicos de exacer- 5. Si se comprueba el origen biliar de la
bación de un cuadro previamente controlado pancreatitis, una CPRE con esfinterotomía
(fiebre, leucocitosis, elevación de la PCR, au- (en lo posible), es obligatoria en las prime-
mento del puntaje del Apache II, hemocultivos ras seis horas.
positivos), deben sospecharse complicaciones
infecciosas y la TAC es indispensable; si se 6. Si es necesaria, la colecistectomía laparos-
encuentra necrosis, la punción con aguja fija cópica debe realizarse durante la misma
es obligatoria para determinar la presencia de hospitalización.
infección. Si la punción es positiva para gér-
menes, se configura el diagnóstico de necrosis 7. El tratamiento concomitante incluye nutri-
pancreática infectada y el paciente debe ser ción parenteral, descomprensión nasogás-
intervenido quirúrgicamente. Se recomienda trica cuando haya distensión o íleo.
la necrosectomia con drenaje abierto.
8. La TAC no está indicada de entrada, a no
La antibioticoterapia sólo está indicada en ser que exista duda sobre el diagnóstico,
casos de necrosis pancreática infectada. El el tratamiento no haya sido exitoso o hay
imipenem ha demostrado tener mejor efica- sospecha de complicaciones.
cia, una difusión sérica variable y buena pe-
netración tisular en la necrosis, por lo cual se 9. En caso de deterioro clínico, la TAC para
recomienda su uso. identificar necrosis y la punción con aguja
fina para identificar infección son obligato-
En resumen: rias.

1. El diagnóstico clínico depende de buena 10.En caso de necrosis pancreática infectada


historia clínica y buen examen físico. La el uso de imipenem está indicado y el pa-
lipasa sérica, la amilasa y la p-amilasa son ciente debe llevarse a cirugía para practi-
útiles en la confirmación de la sospecha car necrosectomía con drenaje abierto.
clínica. El ultrasonido abdominal debe ha-
cerse desde los primeros momentos en 11.En todos los casos se debe procurar llegar
urgencias. a diagnóstico etiológico.

2. Hecho el diagnóstico y dispuesto el trata- 12.En los casos que se consideran previamen-
miento inicial, debe clasificarse la severi- te idiopáticos, la CPRE programada es útil.
dad de la enfermedad utilizando el índice
de Apache II, los criterios de Ranson y la 13.Pacientes con colecciones deben ser so-
Proteína C-reactiva. metidos a drenaje percutáneo.

792
CAPÍTULO XIV: PANCREATITIS AGUDA

LECTURAS RECOMENDADAS acute pancreatitis due to gallstones. Lancet 1988;


2:979-983.
1. Andreulli A, Leandro G, Clemente R, et al. 10. Patiño JF. Non operative interventional therapy in
Metanalysis of somatostatin, octreotide and gallstone-associated pancreatitis. Am J Surg 1988;
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245. manejo de urgencias. Ministerio de Salud,
2. Blamey SL, Osborne D, Gilmour WH, et al. The FEPAFEM. Bogota, 1996.
12. Patiño JF. Protocolo de Manejo de la Pancreatitis
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Biliar. Departamento de Cirugía, Fundación San-
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factors only. Ann Surg 1983; 198:574-578.
13. Pederzoli P, Bassi C, Vesentini S. A randomized
3. Bradley EL. A clinically based classification for
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acute pancreatitis. Summary of the International
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Symposium on Acute Pancreatitis, Atlanta, Ga,
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4. Corbella JM. Pancreatitis agudas biliares. Esfin-
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tero-papilotomías precoces. Drenaje transpapilar 312:436-438.
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pancreático. Rev Argent Cir 1987; 52:286-290. da. Importancia de la simple relación amilasuria/
5. Keim V, Teich N, Fiedler F, et al. A comparison of creatininuria. Trib Med 1987; Dic: 43-46.
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Pancreas 1998; 16:45-49. Fe de Bogotá, 1999.
6. Larvin M, Chalmers AG, McMahon MJ. Dynamic 17. Quintero GA, Fajardo R, Salas L. Evaluacion de
contrast enhanced computed tomography: a pre- la penetración tisular pancreática de meronemÆ
cise technique for identifying and localizing en la profilaxis de las complicaciones sépticas de
pancreatic necrosis. BMJ 1990; 300:1245-1248. la pancreatitis severa. Protocolo de investigación
7. Mayumi T, Ura H, Arata S, et al. Evidence-based Col-Mer 001 en curso, 2003.
clinical practice guidelines for acute pancreatitis: 18. Ranson JHC, Rifkind KM, Roses DF, et al.
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sphincterotomy versus conservative treatment for 3:193-203.

793
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XV

Pileflebitis

Gustavo A. Quintero, MD, MSc, FACS, FRCS


Servicios de Cirugía Hepatobiliar y de Trasplante de Órganos
Departamento de Cirugía,
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a pileflebitis o tromboflebitis séptica de la


vena porta es un proceso infeccioso cuya
incidencia ha ido en aumento en los últimos
fagos que producen un ambiente procoagu-
lante muy propicio para desarrollar la trombo-
sis portal (Bjornson et al 1973). Estos émbolos
años debido, especialmente, a su detección sépticos son enviados al hígado, dando lugar
por medio de las técnicas de la moderna ima- a la formación de abscesos hepáticos. La
genología, tales como la ultrasonografía y la mayor parte de los abscesos se presenta en
tomografía axial computadorizada. A pesar del el hígado derecho debido al drenaje preferen-
desarrollo de nuevos antibióticos y anticoagu- cial laminar secundario de las venas mesenté-
lantes, la tasa de mortalidad en las diferentes ricas superiores. La probabilidad de desarro-
series se mantiene alrededor de 35% (Plem- llo de abscesos hepáticos en el contexto de
mons et al 1995). Lo más importante para con- una pileflebitis puede estar entre el 8% y el
seguir la reducción de estas cifras de mortali- 10% de los casos (McDonald et al 1980).
dad sería poder establecer un diagnóstico pre-
coz de la enfermedad, localizar con certeza
el foco infeccioso causante de la trombosis CUADRO CLÍNICO
portal e iniciar el tratamiento indicado.
La pileflebitis puede tener un inicio y una evo-
lución clínica variados: puede presentarse en
ETIOLOGÍA un paciente casi asintomático hasta tomar for-
mas graves que pueden llegar al shock sépti-
La etiología de la trombosis portal es variada: co con insuficiencia hepática. La fiebre es el
carcinoma hepatocelular, cirrosis hepática, signo más frecuente. Debe sospecharse en
traumatismos, estados de hipercoagulabilidad, presencia de ictericia, alteración de la coagula-
y también se ha visto asociada con el síndro- ción y aumento de enzimas hepáticas como
me de inmunodeficiencia adquirida (Savoiz et la fosfatasa alcalina y las transaminasas (Tung
al 1993). La presencia de un foco infeccioso et al 1996).
abdominal en un territorio que drene a la vena
porta provoca la salida al torrente vascular de El diagnóstico precoz es de vital importancia
una serie de células inflamatorias como linfo- en cuanto al pronóstico del enfermo. Antes del
citos, leucocitos polimorfonucleares y macró- advenimiento de los medios diagnósticos por

794
CAPÍTULO XV: PILEFLEBITIS

imágenes, este se realizaba de forma inciden- de microflora mixta, mientras se obtiene el


tal intraoperatoria o en estudios de autopsia. resultado de cultivos.
Las técnicas imagenológicas más utilizadas
actualmente son la ultrasonografía, la TAC y Las opiniones sobre el tratamiento anticoagu-
el eco-doppler. La ecografía intraoperatoria lante son diversas y realmente todavía no exis-
puede ser un método confiable para confirmar te consenso. Parece haber efectos beneficio-
el diagnóstico y evaluar el grado de extensión sos en los casos de trombosis portal extensa
de la trombosis (Farin et al 1997). La presencia o en situaciones de clara progresión documen-
de aire intraluminal suele corresponder a un tada por estudios radiológicos, en pileflebitis
estadio avanzado de la pileflebitis y es signo supurativa o después de una resección intes-
de mal pronóstico. tinal por isquemia secundaria a la trombosis
portal (Duffy et al 1995). La terapia trombolítica
La imagen ultrasonográfica más frecuente es es otra alternativa recomendada por diferen-
la presencia de material ecogénico en el inte- tes autores (Bizollon et al 1991). Deben con-
rior de la luz portal y de la vena mesentérica, siderarse los posibles efectos secundarios del
lo cual puede ser utilizado para el control evo- tratamiento anticoagulante y trombolítico, so-
lutivo de la enfermedad (Casals et al 1993), bretodo las complicaciones hemorrágicas
especialmente para detectar la recanalización (Baril 1996).
del territorio portal y el desarrollo de caverno-
matosis y/o de hipertensión portal. La TAC es Si se presentan abscesos hepáticos como
útil para descartar la presencia de focos in- complicación de la pileflebitis, el tratamiento
fecciosos abdominales, así como para detec- puede variar. El drenaje percutáneo junto con
tar el desarrollo de abscesos hepáticos (Vujic la antibioticoterpia es la modalidad terapéuti-
et al 1980). La causa más frecuente de pilefle- ca que exhibe mejores resultados (superviven-
bitis es la diverticulitis aguda, seguida de la cia global de 90%) (Seeto et al 1996). El dre-
apendicitis aguda y de la enfermedad inflama- naje percutáneo ha hecho que la cirugía abier-
toria intestinal (Saxena et al 1996). ta de los abscesos hepáticos pase a un segun-
do plano (McDonald et al 1984). La utilización
de un catéter de drenaje percutáneo, así como
TRATAMIENTO la punción-aspiración percutánea son dos
modalidades válidas, siendo la primera más
El manejo de la pileflebitis se basa en la anti- efectiva.
bioterapia de amplio espectro, en el tratamien-
to quirúrgico en los casos de focos infecciosos Otro planteamiento es el drenaje abierto de la
abdominales y en la terapia anticoagulante y rama portal comprometida por una pileflebitis
trombolítica, además del soporte hemodiná- supurativa, colocando un drenaje intraluminal
mico. para facilitar la salida del contenido purulento
al exterior. Esta situación es observada por
El microorganismo más comúnmente aislado Ohtake (1998), con buenos resultados en el
en esta enfermedad es el Bacteroides fragilis, caso de trombosis portal idiopática extensa,
seguido por bacilos aerobios Gram negativos en lugar del tratamiento antibiótico y trombolí-
como la E. coli, y los Estreptococos aerobios. tico. Puede utilizarse también el abordaje per-
El tratamiento empírico con antibióticos de am- cutáneo de la vena porta descrito por Dean
plio espectro debe instaurarse tan pronto co- (1995) en casos de pileflebitis supurativas.
mo sea posible, teniendo en cuenta este tipo

795
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RESUMEN (Spelman et al 2002) LECTURAS RECOMENDADAS


1. Bizollon T, Bissuel F, Detry L, et al. Fibrinolytic
1. La pileflebitis es una trombosis supurativa therapy for portal vein thrombosis. Lancet 1991;
infecciosa de la vena porta. 337:1416.
2. Usualmente está asociada con una infec- 2. Baril N. The role of anticoagulation in pylephlebitis.
ción intraabdominal de una región que dre- Am J Surg 1996; 172:449-452.
ne a la vena porta, más comúnmente una 3. Bjornson HS, Hill EO. Bacteriodaceae in throm-
diverticulitis; puede complicarse con abs- boembolic disease: Effects of cell wall components
cesos hepáticos. on blood coagulation in vivo and in vitro. Infect
Inmunol 1973; 8:911-918.
3. Se asocia en un 41% de los casos con es- 4. Casals S., Enríquez G, Gómez JM, Cabot A. Sono-
tados de hipercoagulabilidad. graphic diagnosis of pylephlebitis in children.
4. Puede producir isquemia intestinal o infar- Pediatr Radiol 1993; 23:567-568.
tos si se propaga. 5. Farin P., Paajanen H., Miettinen P. Intraoperative
5. Puede conducir a hipertensión portal. US diagnosis of pylephlebitis as a complication of
6. La antibioticoterapia inicial debe cubrir mi- appendicitis. Abdom Imaging 1997; 22:401-403.
6. McDonald AP, Howard RJ, Pyogenic liver abscess.
crooorganismos Gram negativos y anaero-
World J Surg 1980; 4:369-380.
bios. La infección generalmente es polimi- 7. Mc Donald MI, Corey GR, Gallis HA, et al. Single
crobiana; los organismos más frecuente- and multiple pyogenic liver abscesses: Natural his-
mente aislados son B. fragilis y Gram ne- tory, diagnosis and treatment, with emphasis on per-
gativos. cutaneous drainage. Medicine 1984; 63:291-302.
7. La sintomatología incluye dolor abdominal, 8. Ohtake H, Urayama H, Nozaki Z, et al. Surgical
fiebre, náusea y vómito. Usualmente no hay drainage for idiopathic suppurative pylephlebitis.
Ann Vasc Surg 1998; 12:83-85.
ictericia. Hay elevación de las pruebas de 9. Plemmons RM, Dooley DP, Longfield RN. Septic
función hepática, especialmente de la fos- thrombophlebitis of the portal vein: Diagnosis and
tasa alcalina y de la gama glutamil trans- management in the modern era. Clin Infect Dis
ferasa. 1995; 14:21-26.
8. El diagnóstico generalmente se hace por 10. Saxena R, Adolph M, Ziegler JR, et al. Pylephlebitis:
ultrasonido o por TAC; se pueden aislar a case report and review of outcome in the antibiotic
era. Am J Gastroenterol 1996; 91:1251-1256.
microorganismos en la sangre.
11. Seeto RK, Rockey DC. Pyogenic liver abscess.
9. La antibioticoterapia debe incluir ampicilina/ Changes in etiology, management and outcome.
gentamicina/metronidazol, hasta cuando se Medicine 1996; 75:99-106.
hayan aislado gérmenes y se tenga un 12. Tung JY, Johnson JL, Liacouras CA. Portal-mesen-
antibiograma. teric pylephlebitis with hepatic abscess in a patient
10. No hay buena evidencia acerca de si la an- with Crohn´s disease treated successfully with
ticoagulación sirve; no se recomienda su anticoagulation and antibiotics. J Pediatr Gastro-
enterol Nutr 1996; 23:474-482.
uso a menos que la pileflebitis progrese a 13. Vujic I, Rogers CI, Le Veen HH. Computed tomo-
pesar de un adecuado manejo antibiótico. graphic detection of portal vein thrombosis. Radio-
11. La mortalidad oscila entre el 11% y el 32%. logy 1980; 135:69-76.

796
CAPÍTULO XVI: ANGINA E ISQUEMIA MESENTÉRICA

CAPÍTULO XVI

Angina e isquemia mesentérica

Juan Carlos Reyes, MD


Departamento de Cirugía
Fundación Santa Fe de Bogotá

ASPECTOS GENERALES

E l término angina se refiere a dolor en un


órgano o sistema como consecuencia de
perfusión tisular insuficiente. Algunos de los
La angina mesentérica es una manifestación
sintomática de la isquemia mesentérica cróni-
ca de tipo oclusivo y es, por lo tanto, un llama-
ejemplos más reconocidos son la angina pec- do de alerta para evitar el ulterior desarrollo
toris que se presenta en el miocardio por insu- de un importante porcentaje de casos catas-
ficiencia de las arterias coronarias, la claudi- tróficos de IMA.
cación intermitente consecuente con la enfer-
medad arterial oclusiva de los miembros infe-
riores, y la angina mesentérica. CONCEPTOS ANATÓMICOS
Como regla general, la angina ocurre cuando El lecho esplácnico está compuesto por un
un órgano demanda un mayor aporte de oxí- componente macrovascular y otro microvas-
geno y sus arterias nutricias son incapaces cular. El macrovascular está conformado por
de administrarlo por medio de un aumento en tres arterias principales:
la perfusión. En el caso del corazón y del mús-
culo esquelético, la demanda se eleva cuando • Tronco Celíaco (TC).
hay ejercicio, mientras que en el caso de los • Arteria Mesentérica Superior (AMS).
órganos del lecho esplácnico, el aumento en • Arteria Mesentérica Inferior (AMI).
la demanda de oxígeno se presenta después
de la ingesta de alimentos, momento en el cual Cada una de ellas tiene a su cargo un territo-
el sistema circulatorio incrementa el flujo san- rio específico que se relaciona con el origen
guíneo hacia esta zona para optimizar la di- embriológico de los segmentos del intestino
gestión y absorción de los nutrientes. primitivo y sus respectivos vasos en el em-
brión y el feto; así, el tronco celíaco irriga los
La Isquemia Mesentérica (IM) se puede clasi- órganos que se derivan del intestino anterior
ficar según el tiempo de evolución en Aguda (esófago distal hasta la unión entre el duode-
(IMA) y Crónica (IMC), y de acuerdo a la fisio- no y el yeyuno incluyendo hígado, bazo, pán-
patología en Oclusiva y No Oclusiva. Algunos creas, vesícula y vías biliares); la AMS irriga
autores también la clasifican según el origen los segmentos derivados del intestino medio
arterial o venoso. (todo el intestino delgado y el colon hasta la
unión del tercio medio y el tercio distal del

797
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

transverso); y la AMI irriga los segmentos de- de modificarse por medio de cambios en el
rivados del intestino posterior (ángulo esplé- tono de las arteriolas. Los esfínteres precapila-
nico del colon, colon descendente, colon sig- res juegan un importante papel en la eficien-
moide y tercio superior del recto). cia del intercambio capilar sin afectar la resis-
tencia vascular. En conjunto con los esfínteres
El componente microvascular lo comprenden postcapilares modifican el tiempo de circula-
los plejos que se encuentran a nivel de la mu- ción sanguínea y la presión hidrostática en los
cosa, la submucosa y la muscular propia del capilares, influyendo directamente en el inter-
estómago, intestino delgado, colon, y recto. cambio de fluidos y solutos hacia el intersticio.
Además de las estructuras microvasculares
de los órganos sólidos del abdomen. Las vénulas postcapilares son las encarga-
das de modificar el volumen efectivo circulan-
Entre las tres arterias esplácnicas principales te en el lecho esplácnico, sin afectar el nivel
abundan las anastomosis y circuitos colate- de perfusión de los órganos mesentéricos.
rales que garantizan un apropiado flujo san-
guíneo hacia todos los órganos en el caso de
oclusión de alguna de ellas. Cuando dos de ASPECTOS CLÍNICOS
las arterias se ocluyen, la posibilidad de que
una sola irrigue todos los segmentos es muy ISQUEMIA MESENTÉRICA AGUDA
baja. La AMS puede ser una excepción en al-
gunas ocasiones en las que su calibre y las Es la forma más frecuente de isquemia me-
variaciones anatómicas (muy frecuentes en el sentérica y la de mayor morbi-mortalidad. A
lecho esplácnico) le permiten perfundir todos pesar de que en los últimos 25 años se ha
los órganos a cargo del TC y de la AMI. logrado aumentar el número de diagnósticos
de IMA por un mayor reconocimiento tempra-
no, la tasa de mortalidad todavía es muy ele-
CONCEPTOS FISIOLÓGICOS Y vada, del orden de 60%.
FISIOPATOLÓGICOS
Aunque no hay cifras exactas sobre la inciden-
En cada uno de los plejos de la microvascula- cia de la IMA, existen datos de centros como
tura esplácnica se encuentra una disposición el Montefiore Medical Center de Nueva York,
“en línea” que regula el flujo total del circuito y que reporta que el 0,1% del total de admisio-
que se compone de: nes corresponde a IMA. Otros informes apor-
tan datos de una de cada 1.000 admisiones
1. Arteriolas o vasos de resistencia. por pacientes con IMA. La población en la que
2. Esfínteres pre y postcapilares o compuertas. se encuentra una mayor incidencia de IMA es
3. Capilares. la mayor de 60 años. Se consideran factores
4. Vénulas o vasos de capacitancia. de riesgo para IMA la ateroesclerosis, las arrít-
mias, la insuficiencia cardiaca congestiva, el
La presión de perfusión arterial es determina- antecedente de reemplazo valvular y la enfer-
da por la presión arterial sistémica, mientras medad valvular reumática.
que la perfusión local está regulada por ele-
mentos moduladores locales. La perfusión ti- La principal causa de IMA es la oclusión agu-
sular, y por tanto la liberación de oxígeno, es- da de la AMS por trombosis o por embolismo.
tán regulados por el flujo sanguíneo, que pue- En un estudio del Massachussets General

798
CAPÍTULO XVI: ANGINA E ISQUEMIA MESENTÉRICA

Hospital, de 103 pacientes que ingresaron por de insuficiencia cardiaca congestiva, arritmias
IMA secundaria a oclusión de la AMS, 55% (principalmente fibrilación auricular), infarto
correspondieron a embolismo y 45% a trom- agudo de miocardio reciente, hipotensión o
bosis. La edad promedio de los pacientes fue shock secundario a trauma o quemaduras,
70 años, con predominio del sexo femenino. obliga a tener en cuenta y a descartar un epi-
Clavien y col. publicaron en 1987 un estudio sodio de IMA. La presencia de síntomas pre-
en el que reportaron 81 pacientes ingresados vios compatibles con angina mesentérica ha
al Hospital Universitario de Basilea (Suiza) con sido catalogada como un hallazgo frecuente
diagnóstico de IMA: 49 tenían oclusión de la en los pacientes con IMA secundaria a trom-
AMS (60%), 33 (41%) sufrieron embolismo y bosis arterial.
16 (19,7%) fueron casos de trombosis.
El dolor es el síntoma principal y las caracte-
La trombosis de la AMS está directamente rísticas del dolor cambian desde el de tipo có-
relacionada con estenosis arterioesclerótica lico al inicio del cuadro (espasmo intestinal por
de su origen en la aorta, fenómeno que predis- isquemia) hasta un dolor continuo de gran in-
pone a que una eventual disminución del gasto tensidad que se localiza principalmente en el
cardíaco produzca el episodio de trombosis. mesogastrio y que el médico puede conside-
rar exagerado ante el aparente buen estado
En raras ocasiones la trombosis es conse- del paciente en estas primeras horas de la en-
cuencia de disección aórtica o de aneurismas fermedad. Con frecuencia se encuentran sig-
aórticos trombosados, o complicación de otras nos disautonómicos como diaforesis profusa
patologías que cursan con vasculitis, como el y marcada palidez mucocutánea. En la medi-
lupus eritematoso, la artritis reumatoidea, la da en que la isquemia progresa, aparecen dis-
dermatomiositis, la púrpura de Henoch- tensión abdominal, vómito y deposiciones san-
Schönlein y la poliarteritis. guinolentas o melénicas. En pacientes de más
de 65 años se puede observar síndrome men-
Otras causas mayores de IMA son la isquemia tal orgánico hasta en 30% de los casos.
arterial no oclusiva y la trombosis venosa me-
sentérica, que en la mayoría de los casos se Los pacientes que ingresan por IMA secunda-
presenta en pacientes que tienen factores de ria a trombosis venosa refieren comienzo más
riesgo como insuficiencia cardiaca congestiva, insidioso del dolor. El examen físico inicial pue-
sepsis, síndrome de hipercoagulabilidad, des- de no mostrar hallazgos importantes, pero en
hidratación severa, uso de anticonceptivos la medida que el intestino pierde viabilidad se
orales, consumo de cocaína, entre otras. presentan signos de irritación peritoneal y de
respuesta inflamatoria sistémica. Los hallaz-
La IMA no oclusiva corresponde en la mayo- gos de laboratorio incluyen recuentos leucoci-
ría de las series a 20-30% del total de casos y tarios mayores de 15.000/mm3 en más de 75%
la trombosis venosa mesentérica a 10-15%. de los pacientes, elevación de enzimas como
la amilasa sérica, LDH, CPK y STGO. En 50%
El diagnóstico temprano de un episodio de IMA de los casos se encuentra acidosis metabólica
requiere un alto índice de sospecha por parte en los gases arteriales, y este es un signo de
del médico, fundamentado en la identificación particular importancia.
de los pacientes con factores de riesgo. La
instauración súbita de dolor abdominal en un La radiografía simple de abdomen puede ser
paciente mayor de 50 años con antecedentes normal en la fase inicial de la IMA, pero en la

799
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

medida en que progresa el cuadro puede ver- El primer paso en el manejo de IMA es optimi-
se el signo de “huella digital”, íleo adinámico zar el estado hemodinámico del paciente me-
o ausencia total de gas. diante resucitación agresiva que incluya la
corrección de las causas precipitantes. La
El Dupplex-scan puede ser de ayuda para administración de oxígeno suplementario ayu-
determinar trombosis venosa y en algunos da a mejorar su disponibilidad tisular. En casos
casos puede mostrar alteraciones del flujo de debidamente seleccionados y según la expe-
la AMS, aunque este método se limita un poco riencia del personal a cargo, se debe monito-
por la variación en el flujo normal de este vaso, rizar al paciente con un catéter venoso cen-
que está entre 300 y 600 ml por minuto. tral para el mejor manejo de los líquidos en la
reanimación.
La tomografía axial computadorizada (TAC)
con bolos de contraste endovenoso para ob- Corroborado el diagnóstico, se procede de
servar la vasculatura esplácnica puede deter- inmediato con una angiografía selectiva de la
minar la presencia de trombos arteriales o ve- arteria mesentérica superior (ASAMS) y, de
nosos, así como de asas intestinales isqué- acuerdo con los hallazgos, se inicia infusión
micas. intra-arterial de un agente vasodilatador. La
papaverina es el más popular, en concentra-
El estudio de elección en los pacientes en ciones de 1 mg/ml a una tasa de 30 a 60 mg/
quienes se tiene alta sospecha de IMA es la hora por bomba de infusión. Es necesario vi-
angiografía selectiva, que además de ser diag- gilar la presión arterial y la frecuencia cardiaca,
nóstica, hace parte del manejo inicial que se porque si el catéter se desplaza de la AMS,
recomienda en la actualidad para pacientes se produce una intensa vasodilatación que
con IMA, tanto de origen oclusivo como no puede ocasionar un descenso grave de la pre-
oclusivo. sión arterial.

Los estudios con medicina nuclear y con imá- Se debe hacer una primera evaluación angio-
genes por resonancia magnética (RM), mues- gráfica a los 20 minutos de iniciada la infu-
tran resultados favorables, superiores a los de sión. Así se haya tomado la decisión de llevar
la TAC. Los costos y la escasa disponibilidad al paciente a cirugía, la infusión selectiva de
de estos recursos en los centros hospitalarios papaverina hace parte del manejo del embo-
son factores que limitan su uso en nuestro lismo y de la trombosis de la AMS.
medio.
Cuando se hace necesaria la laparotomía por-
El manejo inicial debe ser conocido por cual- que persisten los signos de irritación peritoneal,
quier médico que haga parte de un equipo de o se encuentran émbolos o trombos en la AMS,
urgencias, considerando que el manejo defi- los objetivos fundamentales son restaurar el
nitivo se ha de realizar en un centro hospita- flujo sanguíneo intestinal y resecar los segmen-
lario de nivel III o IV. La mayoría de estos pa- tos irrecuperables de intestino. Para estable-
cientes ingresa al servicio de urgencias con cer si la viabilidad del intestino es recuperable,
alteraciones hemodinámicas, bien sea como se debe realizar primero la revascularización y
parte del cuadro propio de IMA, o como parte luego determinar, en el curso de la operación,
de una patología de base descompensada que si el intestino es viable o no lo es; para ello se
lo llevó al desarrollo de IMA. cuenta con diferentes técnicas, tales como la
colocación del intestino en compresas húme-

800
CAPÍTULO XVI: ANGINA E ISQUEMIA MESENTÉRICA

das tibias durante 10 a 20 minutos para verifi- var a cabo como rutina, y la actitud del ciruja-
car la recuperación de la peristalsis y de su no debe ser liberal a este aspecto.
color normal, o la inyección de fluoresceína
para luego examinar el intestino con lámpara ISQUEMIA MESENTÉRICA CRÓNICA
de luz ultravioleta y verificar su captación. El
doppler intraoperatorio y la oximetría de super- En la IMC aparece la angina mesentérica co-
ficie son otros elementos de ayuda en la verifi- mo una característica clínica. El dolor episó-
cación de la viabilidad intestinal. dico post-prandial que se origina en el mús-
culo liso intestinal como consecuencia de un
Cuándo la IMA es secundaria a trombosis ve- aporte insuficiente de oxígeno durante la fase
nosa, se deben tener en cuenta factores pre- de mayor demanda metabólica, es lo que per-
disponentes como síndromes de hipercoagu- mite comparar este evento con la angina pec-
labilidad. La presentación clínica es más insi- toris y la claudicación intermitente.
diosa que los casos de origen arterial y el co-
lapso cardiovascular es más frecuente por el La isquemia mesentérica crónica verdadera
secuestro de grandes volúmenes de líquido es relativamente rara, y como el dolor post-
en las asas intestinales. prandial no es patognomónico de esta entidad,
se debe ser muy cuidadoso en cuanto a su
Es reconocido que el diagnóstico temprano diagnóstico. Varios estudios han demostrado
es clave en el manejo de todos los casos de que tan solo 35% a 40% de los pacientes con
IMA. Pero en la trombosis venosa es de máxi- sospecha clínica de IMC por dolor post-pran-
ma importancia porque estos pacientes se dial, realmente padecen la enfermedad.
pueden beneficiar muchísimo de un manejo
no quirúrgico. Es conveniente utilizar otros criterios clínicos
para definir el diagnóstico de IMC, como la
La primera fase del manejo no quirúrgico es pérdida crónica de peso y la sitofobia (miedo
la anticoagulación plena con heparina, mien- a la ingesta alimentaría).
tras se estudia la condición predisponerte; en
general, se logra el diagnóstico de los facto- La causa más frecuente de IMC es la atero-
res desencadenantes en 50% de los casos. esclerosis de las arterias principales del le-
Si después de 24-48 de horas de iniciada la cho esplácnico. Debido a la rica circulación
anticoagulación el paciente no presenta me- colateral característica de la circulación es-
joría o presenta signos de peritonitis o sepsis, plácnica, es necesario que dos de las tres arte-
debe ser llevado a laparotomía para resecar rias principales tengan un compromiso de por
los segmentos de intestino necrosado, tenien- lo menos 75% de su luz para que se desarro-
do en cuenta que los márgenes de resección lle la enfermedad.
no tengan signos de oclusión venosa como
edema del mesenterio, trombosis arterial se- Al igual que en la isquemia aguda, la angiogra-
cundaria, edema de la pared intestinal o cam- fía tiene utilidad diagnóstica y terapéutica. La
bios en la coloración de la pared intestinal. A ultrasonografía Dupplex pre y postprandial
pesar de que los márgenes de resección no aporta información semicuantitativa útil, y se
estén comprometidos, la progresión de la puede comparar con un ecocardiograma de
trombosis venosa es muy frecuente y casi se estrés. La utilidad terapéutica de la angiografía
puede decir que es la regla general; por lo reside en la posibilidad de realizar angioplastia
tanto, las segundas revisiones se deben lle- percutánea o colocar un stent.

801
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El manejo quirúrgico es el más aceptado y el after open heart surgery. Ann Thorac Surg 2001;
de mejores resultados; comprende la endar- 72:1583-1586.
terectomía, los puentes, la reimplantación arte- 10. Laghi A, Lannaccone R, Catalano C, Passariello
R. Multislice spiral computed tomography angio-
rial o una combinación de los tres. La técnica
graphy of mesenteric arteries. Lancet 2001; 358:
de revascularización con puentes es la más 638-639.
utilizada, y se hace con injertos de vena safena 11. Lefkovitz Z, Cappell MS, Lookstein R, et al.
o con prótesis sintéticas de politetrafluoroeti- Radiologic diagnosis and treatment of gastrointes-
leno (PTFE) cuyo extremo proximal se anasto- tinal hemorrhage and ischemia. Med Clin North
mosa preferiblemente a la aorta infrarrenal. Am 2002; 86:1357-1399.
12. Macari M, Chandarana H, Balthazar E, Babb J.
Intestinal ischemia versus intramural hemorrhage:
CT evaluation. AJR Am J Roentgenol 2003; 180:
LECTURAS RECOMENDADAS
177-184.
13. Matsumoto AH, Angle JF, Spinosa DJ, et al.
1. Acosta S, Nilsson TK, Bjorck M. Preliminary study Percutaneous transluminal angioplasty and sten-
of D-dimer as a possible marker of acute bowel ting in the treatment of chronic mesenteric ische-
ischaemia. Br J Surg 2001; 88:385-388. mia: results and longterm followup. J Am Coll Surg
2. Boley SJ, Brandt LJ. Intestinal ischemia. Surg Clin 2002; 194:22S-31S.
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treatment of nonocclusive mesenteric ischemia 2000; 175:1601-1607.

802
CAPÍTULO XVII: SEPSIS ABDOMINAL

CAPÍTULO XVII

Sepsis abdominal

Jaime De la Hoz, MD
Profesor Honorario de Cirugía
Facultad de Medicina, Universidad Nacional
Bogotá

L as infecciones que surgen en el ámbito de


la normalmente estéril cavidad peritoneal
y que causan seria enfermedad sistémica, son
La peritonitis terciaria o persistente ocurre
en personas que sufren una peritonitis secun-
daria y que no son capaces de aclarar la infec-
colectivamente llamadas sepsis abdominal. El ción, o quienes subsecuentemente desarrollan
término se refiere a un espectro de entidades superinfección de toda la cavidad peritoneal.
que se conocen como peritonitis primaria, se- Se caracteriza por alta mortalidad, y proba-
cundaria y terciaria; también están incluidos blemente representa una forma de superinfec-
los abscesos intraabdominales. ción que indica inmunosupresión subyacente.

La peritonitis primaria tiene que ver con la El éxito del tratamiento depende de:
infección del líquido peritoneal sin que haya • Remoción de la fuente de infección.
ocurrido perforación de una víscera. Este fenó- • Erradicación de las bacterias residuales.
meno es causado por siembra del peritoneo • Soporte hemodinámico y metabólico.
por diseminación hematógena a partir de una
fuente extraabdominal o a través de un con- El control de la fuente es la más importante de
ducto (como puede ocurrir con un catéter intra- estas medidas. El problema es causado por
peritoneal), y casi siempre es responsable un un proceso que conduce a necrosis del tubo
solo patógeno microbiano. Pacientes con gastrointestinal y perforación, lo cual requiere
grandes cantidades de líquido peritoneal (asci- intervención quirúrgica. Los objetivos de la ope-
tis, diálisis peritoneal) son más susceptibles ración son eliminar la causa subyacente de la
de desarrollar el proceso, que se debe princi- infección, prevenir la posterior contaminación
palmente a deterioro de los mecanismos de y lograr la limpieza peritoneal. Los agentes anti-
defensa del peritoneo. microbianos juegan un papel crítico en el ma-
nejo. La escogencia del agente antimicrobiano
La peritonitis secundaria resulta de la per- se complica por el gran espectro polimicrobiano
foración de una víscera intraabdominal. Pues- de patógenos presentes en la infección intra-
to que el inóculo son los microorganismos pre- peritoneal, por la necesidad de un tratamiento
sentes en la luz visceral, casi siempre es una empírico inicial sin tener todavía conocimiento
infección polimicrobiana, con la presencia de del patógeno específico y por la gran variedad
microorganismos tanto aerobios como anae- de antibióticos para escoger.
robios.
El drenaje percutáneo de abscesos intraabdo-
minales y otras colecciones representa un

803
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

avance muy importante, y actualmente mu- DEFENSA DEL HUÉSPED


chos pacientes pueden ser manejados por
este método. La cavidad peritoneal es un ambiente estéril.
La primera línea de defensa peritoneal es la
barrera física que forma la microflora autócto-
MICROBIOLOGÍA na dentro de la luz visceral, que impide la en-
trada a la cavidad peritoneal. El moco secre-
Las infecciones intraabdominales se clasifican tado por el epitelio mucoso forma parte de esa
como monomicrobianas o polimicrobianas. primera barrera. Algunos microorganismos
Las monomicrobianas ocurren con mayor fre- son capaces de traslocar a través de la muco-
cuencia en el árbol biliar, en la peritonitis bacte- sa intestinal, y entonces encuentran la segun-
riana espontánea y en las pancreatitis, y los da línea de defensa, el tejido linfoide intesti-
patógenos más comunes son bacterias colifor- nal y su sistema de drenaje linfático. La inmu-
mes, primariamente Escherichia coli, y estrep- noglobulina A o secretora y el complemento
tococos. Las peritonitis y los abscesos intra- promueven la opsonización y el transporte del
abdominales son polimicrobianos. microorganismo intacto a los nódulos linfáticos
mesentéricos y su posterior bacteriolisis.
En la sepsis intraabdominal participa la flora
gastrointestinal del huésped. Los microbios Los microorganismos que logran penetrar la ca-
específicos normalmente presentes en el trac- vidad peritoneal encuentran tres tipos de de-
to gastrointestinal constituyen el inóculo que fensa: 1) depuración (“clearance”) bacteriana,
da lugar a la infección. mediante la absorción translinfática; 2) fago-
citosis y muerte por leucocitos; y 3) secuestro.
La saliva contiene aproximadamente 10 9 bac-
terias/mL, con predominio de las anaerobias El influjo de líquido inflamatorio constituye un
y, en menor escala, las aerobias. El estómago tercer mecanismo de defensa, el secuestro mi-
y el intestino proximal contienen una menor crobiano, que ocurre cuando el fibrinógeno po-
cantidad, 104/mL. El jugo gástrico, por su aci- limeriza a fibrina. Durante este proceso, gran
dez, representa el mecanismo principal para número de microorganismos son inespecífi-
la eliminación de la población bacteriana de- camente atrapados (secuestrados) dentro del
glutida con la saliva, y la motilidad del intesti- coágulo de fibrina.
no evita la adherencia bacteriana en su inte-
rior. La microflora del intestino delgado distal La microbiología de la sepsis intraabdominal
es aún más abundante, superior a 10 8/mL. La varía de acuerdo con las fuentes de las bacte-
mayor concentración de bacterias se encuen- rias (gástrica, intestino delgado o colon), el ori-
tra en el colon, con niveles geométricos hasta gen comunitario versus el origen nosocomial,
el punto de ocupar espacio entre 10 11 1012/g los antecedentes de tratamiento antimicrobiano
de materia fecal. El 99,9% de esta población y el rigor del estudio microbiológico. El aerobio
es anaerobia. Se estima que cada persona dominante es la E. coli y el anaerobio el B. fra-
alberga en su intestino grueso más de 400 gilis, pero casi todas las infecciones son polimi-
especies, que incluyen flora autóctona, Bacte- crobianas con la presencia de dos o tres espe-
roides fragilis, otras muchas especies de cies de aerobios y más de nueve de anaerobias.
bacteroidáceas, estreptococos, clostridium sp,
bifodobacterias, eubacterias, E. coli y otras El tracto gastrointestinal es el mayor reservorio
enterobacterias. para los enterococos. El Enterococcus fecalis

804
CAPÍTULO XVII: SEPSIS ABDOMINAL

(anteriormente denominado Streptococcus Tomografía computarizada (TAC). Tiene una


fecalis) constituye el 90% de este género, y el sensibilidad de 85% a 100% y una especifici-
Enterococcus faecium (previamente Strepto- dad superior a 98%. Es inferior a la ultrasono-
coccus faecium) representa el otro 10%. En grafía en la detección de abscesos pélvicos y
los últimos años, el Enterococo se ha conver- en la etapa temprana de una peritonitis gene-
tido en el segundo patógeno nosocomial des- ralizada o localizada.
pués de la E. coli, según el Sistema Nacional
de Vigilancia de Infecciones Nosocomiales de Resonancia magnética con gadolinium. Es
los Estados Unidos. un método costoso y que no está disponible
sino en hospitales de alta complejidad.
Diversas sustancias, como hemoglobina, ba-
rio o fibrina, pueden actuar como adyuvantes
en la letalidad en una peritonitis, y ciertos as- TRATAMIENTO
pectos de los mecanismos de defensa perito- CON ANTIBIÓTICOS
neal local pueden ejercer efectos deletéreos
sistémicos: por ejemplo, la absorción translin- Los esquemas de antibioticoterapia se pue-
fática de bacterias puede provocar sepsis den agrupar así:
sistémica.
1. Prevención de la infección intraabdominal
en cirugía electiva de colon con prepara-
ESTUDIOS DIAGNÓSTICOS ción mecánica y la administración oral de
agentes antimicrobianos.
Las radiografías simples de abdomen carecen 2. Terapia antimicrobiana empírica antes de
de sensibilidad, pero el aire libre bajo el dia- la laparotomía, durante las fases iniciales
fragma es considerado signo diagnóstico de de dos subtipos de infección abdominal:
una perforación visceral, y aire o gas dentro a) apendicitis gangrenada o perforada;
del hígado, tracto biliar, pared intestinal, bazo b) trauma gastrointestinal penetrante.
o en retroperitoneo es fuertemente sugestivo 3. Tratamiento de la peritonitis secundaria
de infección intra o retro peritoneal, producida establecida con agentes antimicrobianos
por bacterias, especialmente las anaerobias. intravenosos.

Las técnicas de escanografía abdominal por PROFILAXIS QUIRÚRGICA.


ultrasonido (ecografía), tomografía axial com- PREPARACIÓN DE COLON PARA
putadorizada (TAC) o resonancia magnética CIRUGÍA ELECTIVA
significan una revolución en la detección de
infecciones intraabdominales, especialmente El régimen de neomicina oral más eritromicina
de abscesos. ha permanecido como la práctica estándar: 1
gramo de neomicina y 1 gramo de eritromicina
Ultrasonografía. Es de uso rutinario para de- base, tres veces, en un período breve, el día
tectar abscesos intraperitoneales, especial- antes de la cirugía. Otros regímenes efecti-
mente pélvicos, retroperitoneales y del vos son metronidazol más neomicina, eritro-
cuadrante superior derecho. Se puede efec- micina, aztreonam o cefotaxime y clindamicina
tuar al lado de la cama, el resultado es rápido y aztreonam o gentamicina.
y carece de exposición a las radiaciones.

805
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. RECOMENDACIONES PARA PROFILAXIS EN CIRUGÍA DE COLON

FUENTE RECOMENDACIONES ALTERNATIVA


SOC. Infecciones 1 g neomicina + 1 g eritromicina a la 1, Cefotoxin, cefotetan o cefmetazole 1 g IV
Quirúrgicas 1993 2 y 11 pm del día anterior. pre inducción.
IDSA 1992 Neomicina / eritromicina (régimen igual Un sólo agente con actividad sobre
que arriba). coliformes y anaerobios.
ASHP Neomicina/ Eritromicina (igual que arriba), Cefotetan, cefmetazole, cefotaxime o
ceftizoxime en la inducción.

IDSA: Sociedad Americana de Enfermedades Infecciosas; ASHP: Sociedad Americana de Hospitales y Farmacia.

Duración del tratamiento profiláctico con • Infecciones complicadas: 5 a 14 días.


antibióticos. El principio básico de la profila- • Infecciones no complicadas: 3 a 7 días.
xis antimicrobiana se basa en que la adminis- • Infecciones de la herida: 2 a 5 días.
tración debe ser limitada a no más de 24 ho- (Tabla 2).
ras. Este objetivo es rápidamente alcanzado
con la preparación oral de neomicina-eritro-
micina para la cirugía electiva de colon, en la TERAPIA ANTIMICROBIANA PARA
cual 3 gramos de cada droga son administra- APENDICITIS PERFORADA Y GANGRENADA
dos en 10 horas (1, 2 y 11 pm), durante las 18
horas que anteceden a la cirugía. La combinación de gentamicina y clindamicina
ha demostrado superioridad sobre los regíme-
Las pautas corrientes para profilaxis en cirugía nes con un sólo agente activo contra aerobios.
tienen en cuenta otros sitios anatómicos como Por el contrario, el tratamiento con un sólo
el tracto biliar o el gastrointestinal superior y agente que posea actividad contra aerobios y
se hacen con base una sóla dosis de cefa- anaerobios es equivalente en sus resultados
zolina. a los del régimen de un aminoglucósido más
un agente antianaerobio. Ejemplos de estos
En el trauma abdominal penetrante el trata- agentes únicos son cefoxitin, imipenem-cilas-
miento ya no es profiláctico, y 24 horas de tra- tatina, ticarcilina-clavulanato y ceftizoxime. En
tamiento con agentes antimicrobianos es sa- el régimen combinado también se puede re-
tisfactorio, independiente del grado de injuria emplazar el aminoglucósido por cefalosporina
o extensión de la contaminación. de tercera generación o por un monobac-
támico.
En pacientes con infecciones establecidas, el
tiempo recomendable es:

806
CAPÍTULO XVII: SEPSIS ABDOMINAL

TABLA 2. DURACIÓN DEL TRATAMIENTO CON ANTIBIÓTICOS

Profilaxis: Cirugía gástrica o biliar, cefazolina 1-2 g IV por 1 dosis.Cirugía colon electiva: eritromicina y neomicina 3 g de
cada uno en un periodo de 10 horas.
Trauma penetrante abdominal: sujeta al régimen de 24 horas.
Infección establecida:
Infección complicada: Terapia parenteral >3 días total (oral y parenteral) 5 a 14 días.
Paciente debe estar afebril, leucocitos <12.000 mm3 y la función intestinal debe haber retornado antes de suspender los
antibióticos.
Infección no complicada: 3 a 7 días.
Infección de herida postoperatoria 2 – 5 días.

TERAPIA ANTIBIÓTICA EN EL TRAUMA TRATAMIENTO ANTIMICROBIANO EN


GASTROINTESTINAL PENETRANTE PERITONITIS SECUNDARIA ESTABLECIDA

Sin terapia antimicrobiana, a pesar de opera- El tratamiento primario de la peritonitis secun-


ción inmediata, más de la mitad de los pacien- daria es quirúrgico, y consiste en el control de
tes con trauma abdominal penetrante desarro- la fuente con remoción de las colecciones lí-
llan infección superficial (de la herida) o pro- quidas purulentas o infectadas y el desbrida-
funda (intraabdominal). miento de los tejidos necróticos. El análisis cui-
dadoso de la actividad de los agentes anti-
Regímenes combinados de cefoxitina o de microbianos, solos o en combinación, se difi-
clindamicina más gentamicina han comproba- culta por la incapacidad para controlar un gran
do su eficacia, con una tasa igual de infección número de variables (edad del paciente, fuen-
de 9%. También es eficaz un régimen de un te de infección, entre otros) que están presen-
solo agente que posea actividad contra aero- tes en la peritonitis secundaria. (Tabla 5).
bios y anaerobios.
El tratamiento de cualquier enfermedad infec-
La duración apropiada de terapia antimicro- ciosa empieza con la terapia empírica con
biana después de trauma gastrointestinal pe- base en el concepto de cubrir los patógenos
netrante depende del tiempo trascurrido des- esperados, mientras se informa el resultado
de la injuria. Cuando el paciente recibe de in- de los cultivos. La coloración de Gram y otras
mediato el antibiótico (3 a 4 horas después pruebas para identificar el agente infeccioso
de ser herido), la duración que ha demostrado son muy útiles en esta fase, donde la elec-
ser efectiva es de 12 horas, y varios autores ción inicial de uno o varios agentes antimicro-
han demostrado que no existe diferencia entre bianos es quizá el paso más crítico. La mejor
12 horas y 5 días. Sin embargo, la mayoría supervivencia ocurre en los pacientes que res-
de los autores continua el tratamiento antimi- ponden a esta antibioticoterapia inicial. Es
crobiano por 3 a 7 días, debido a que la inci- pertinente anotar que los pacientes que de-
dencia de infección en estas circunstancias sarrollan una peritonitis secundaria severa es
es alta. porque recibieron una terapia antimicrobiana
empírica inadecuada, y son éstos los que ex-
hiben los peores resultados finales. Se dice

807
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

que la terapia es inadecuada cuando el culti- TERAPIA ESTÁNDAR CON DOS AGENTES
vo muestra microorganismos que no están
dentro del espectro de actividad del régimen La terapia estándar en la peritonitis secunda-
antimicrobiano inicial empleado. ria consiste en un aminoglucósido combina-
do con un agente antianaerobio, generalmente
clindamicina o metronidazol; el cloranfenicol,
es menos atractivo por los posibles efectos
colaterales, entre ellos la muy rara ocurrencia
de anemia aplásica.

TABLA 3. TASA DE CURACIÓN CON DOS AGENTES EN EL MANEJO DE LA PERITONITIS SECUNDARIA ESTABLECIDA

REFERENCIA RÉGIMEN ANTIBIÓTICO TASA DE CURACIÓN


CLÍNICA (%)
CMCSG Metronidazol + gentamicinaClindamicina + gentamicina 8384
Kirkpatrick et al Metronidazol + gentamicinaClindamicina + gentamicina 7786
Smith et al Metronidazol + tobramicinaClindamicina + tobramicina 8587
Van de Auwera et al Metronidazol + varios agenClindamicina + varios agen 6460

CMCSG: Canadian Metronidazole–Clindamycin Study Group

El Enterococcus fecalis y el Enterococccus fae- el aztreonam o una cefalosporina de segun-


cium, dos de los principales patógenos en las da o tercera generación); 2) sustituyendo el
infecciones nosocomiales, son relativamente esquema de dos agentes por uno solo de
refractarios a los antibióticos incluidos en los amplio espectro (ejemplo: una cefalosporina
regímenes más usados en la sepsis intraabdo- específica de segunda o tercera generación,
minal. Muchas cepas del E. faecium son resis- un carbapenem o una ampicilina o ticarcilina
tentes a virtualmente todas las drogas, por lo más un inhibidor betalactámico-sulbactam o
cual se ha propuesto agregar ampicilina a los ácido clavulánico).
regímenes combinados duales muy temprana-
mente y convertirlos en regímenes triples. Op- REGÍMENES DE DOS AGENTES
ciones alternativas contemplan el uso de NO ESTÁNDAR, REEMPLAZANDO
aminoglucósidos con penicilina o betalactá- A LOS AMINOGLUCÓSIDOS
micos con inhibidores de la betalactamasa.
El ceftacidime más clindamicina y la tobrami-
La nefro- y ototoxicidad de los aminoglucósi- cina más clindamicina han demostrado resul-
dos, y el costo de la administración de dos tados similares, con tasas de curación de 91%
agentes ha llevado a proponer: 1) reemplazo y 88% respectivamente (Bubrick y col 1990).
del componente aminoglucósido del régimen Otras cefalosporinas de tercera generación
de dos drogas por una equivalente, pero me- (cefotaxime, ceftriaxone), representan alterna-
nos tóxica (ejemplo: un monobactámico como tivas para sustituir los aminoglucósidos.

808
CAPÍTULO XVII: SEPSIS ABDOMINAL

TABLA 4. CURACIÓN CLÍNICA CON AGENTES NO ESTÁNDAR EN EL RÉGIMEN DE DOS DROGAS,


SUSTITUYENDO AL AMINOGLUCÓSIDO.

Referencia Régimen antibiótico N Tasa de curas %


Birolini et al Aztreonam+clindamicinaTobramicina+clindamicina 3630 9287
Bubrick et al Ceftazidime+clindamicinaTobramicina+clindamicina 3034 9188
Stone et al Cefotaxime+clindamicina 34 88

La combinación de ciprofloxacina más clinda- REGÍMENES CON UN SÓLO AGENTE DE


micina ha demostrado ser tan efectiva como AMPLIO ESPECTRO
la gentamicina más clindamicina.
Dos agentes antimicrobianos de amplio es-
pectro, el imipenem-cilastatina y la ticarcilina-
clavulanato tienen excelente actividad contra
organismos gramnegativos y buena acción
contra anaerobios, que es sólo superada por
clindamicina, metronidazol y cloranfenicol.

TABLA 5. TASA DE CURACIÓN CLÍNICA CON REGÍMENES DE UN SÓLO AGENTE DE AMPLIO ESPECTRO
EN EL TRATAMIENTO DE LA PERITONITIS SECUNDARIA.

Referencia Régimen antibiótico N Casos Tasa de Curaciones


clínicas %
Fink Ticarcilina – clavulanato 2025 7564
Gentamicina - clindamicina
Imipenem- cilastatina 4746 9489
Gonzembach y col Netilmicin- clindamicina
Imipenem – Cilastatin
Ampicilina – gentamicina
Leaper y col Metronidazol 1924 8492
Imipenem – cilastatina
Solomkin y col Tobramicina – clindamicina 8181 8370
Ampicilina – Sulbactam
Yellin y col Gentamicina- clindamicina 6738 7687

Factores que influencian la escogencia del Agentes que poseen actividad directa contra
agente específico.- La escogencia del agen- bacilos gramnegativos aerobios, incluyen
te antimicrobiano debe ser dictada claramen- aminoglucósidos, cefalosporinas de segunda
te por la actividad establecida de estos antibió- y tercera generación, monobactámicos, carba-
ticos contra tipos de patógenos específicos. penem, carboxipenicilinas y amplicilina o

809
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ticarcilina combinadas con un inhibidor vamente. Ceftizoxime, cefotetan y otras


betalactámico (sulbactam o ácido clavulánico). cefalosporinas de tercera generación exhiben
Al revisar la sensibilidad in vitro de las bacte- una tasa más alta de resistencia por los
rias anaerobias a varios agentes, se ha de- anaerobios. Con base en la eficacia clínica,
mostrado nula resistencia al metronidazol y susceptibilidad in vitro y potencial de toxici-
al cloranfenicol, menos de 1% al imipenem- dad, se pueden considerar como convenien-
cilastatina, ticarcilina-clavulanato, ampicilina tes para tratar infecciones intraabdominales
sulbactam y cefaperazone-sulbactam, mien- anaerobias al metronidazol, imipenem-
tras que la clindamicina y la cefoxitina tienen cilastatina, ticarcilina-clavulanato, ampicilina-
una tasa de resistencia de 3% y 8% respecti- sulbactam, clindamicina y cefoxitin. (Tabla 6).

TABLA 6. TERAPIA SUGESTIVA PARA EL TRATAMIENTO DE LA PERITONITIS SECUNDARIA ESTABLECIDA.

Infección intraabdominal severa sin disfunción renal


• Carbapenem
• Aminoglucósido + agente antimicrobiano + ampicilina.
Infección abdominal severa con disfunción renal.
• Carbapenem
• Monobactam + clindamicina + ampicilina
• Cefalosporina de segunda o tercera generación + agente antianaerobio.
Infección intraabdominal leve a moderada.
• Cefalosporina de segunda o tercera generación con actividad antianaerobia.
• Ampicilina o ticarcilina + inhibida betalactámico.
• Monobactámico + clindamicina + ampicilina.
• Cefalosporina de 2 o 3 generación + agente antianaerobio.

En resumen, la mayoría de los casos de peri- siempre y cuando no haya disfunción renal,
tonitis secundaria adquirida por fuera del hos- caso en el cual el aminoglucósido debe susti-
pital puede ser adecuadamente tratada con tuirse por un monobactámico (aztreonam) o
un solo agente de amplio espectro, no tóxico una cefalosporina de tercera generación.
y que ejerza actividad contra bacterias aero-
bias Gram negativas y anaerobias. Duración de la terapia. La terapia antimicro-
biana en una sepsis intraabdominal debe con-
En los pacientes que desarrollan la infección tinuar hasta cuando la temperatura y el re-
en el ambiente nosocomial, ancianos, inmuno- cuento leucocitario y su cuadro diferencial
suprimidos, debilitados o de otra manera en hayan retornado a límites normales.
riesgo de albergar microorganismos resisten-
tes, están indicados los regímenes con agen- TERAPIA ANTIBIÓTICA EN LA PERITONITIS
tes de amplio espectro. El imipenem-cilastati- TERCIARIA
na es tal vez el de preferencia, si el paciente
no posee alergia a la penicilina. El régimen El tratamiento de la peritonitis terciaria se basa
dual de metronidazol o clindamicina más un en los resultados de los cultivos y de la sensi-
aminoglucósido es de tener en cuenta, bilidad. El tratamiento con dos agentes dife-

810
CAPÍTULO XVII: SEPSIS ABDOMINAL

rentes en sus mecanismos de acción, proba- la evidencia microbiológica de necrosis peri-


blemente es aconsejable para microorganis- pancreática infectada.
mos resistentes. Los enterococos son resis-
tentes a casi todos los antimicrobianos. Preparación preoperatoria. Antes de em-
prender la operación, el paciente debe recibir
Terapia antimicótica. Las especies de candi- agentes antimicrobianos sistémicos y se co-
da son los hongos más comúnmente cultiva- rrige la condición crítica mediante restaura-
dos en la infección abdominal. La infección ción de líquidos y electrolitos y la administra-
por candida dentro del peritoneo es mejor tra- ción de oxígeno. La posibilidad de una colosto-
tada con anfotericina B por vía IV. El fluconazol mia debe anticiparse y debe ser incluida en el
ha sido recomendado como una alternativa proceso de información al paciente y allega-
efectiva y relativamente no tóxica. Pero no se dos. Finalmente, si el diagnóstico es incierto,
ha demostrado que sea equivalente en efica- se debe comunicar al paciente que la laparoto-
cia a la anfotericina B en el tratamiento de las mía puede ser negativa.
infecciones micóticas intraabdominales.
Estrategia operatoria. Los principios quirúr-
gicos consisten en detener la contaminación
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO de la cavidad peritoneal y tratar la causa sub-
yacente del escape microbiano. Las conside-
Manejo preoperatorio. Indicación para cirugía raciones técnicas son: una adecuada exposi-
La laparotomía puede estar indicada en estos ción del campo operatorio, generalmente a tra-
pacientes, tanto con propósitos de diagnósti- vés de una larga incisión vertical; el buen ma-
co como de tratamiento. nejo de la perforación intestinal; tratamiento
de los extremos del intestino después de cual-
Como principio general, la presencia de pus quier resección; profuso lavado de la cavidad
o de contenido gastrointestinal en la cavidad peritoneal; y decisión acerca del cierre de la
peritoneal es un hallazgo que hace obligato- fascia y de la herida.
rio el tratamiento quirúrgico inmediato.
La Tabla 7 resume las opciones quirúrgicas
En la pancreatitis aguda, la laparotomía está más usadas en el tratamiento de la contami-
indicada si la condición clínica del paciente nación emanada de diferentes fuentes en el
se está deteriorando, especialmente si existe tracto gastrointestinal.

811
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 7. MANEJO DE LA FUENTE DE CONTAMINACIÓN

FUENTE PROCEDIMIENTO
Estómago - Cáncer Resección con anastomosis gastrointestinal o gastroyeyunal
Estómago - Úlcera Resección con anastomosis, simple biopsia y parche, si las
péptica condiciones son desfavorables.
Duodeno- Úlcera Vagotomía, piloroplastia( o gastroyenunostomía); simple
péptica parche si las condiciones son
desfavorables.—
Vesícula biliar Resección si es posible; drenaje (colecistostomía) si el paciente
es inestable o la vesícula no puede ser removida satisfactoriamente.
Intestino delgado Resección con anastomosis primaria; exteriorización por
escapes anastomóticos recurrentes.
Apéndice Resección; si ésta es insegura, simple drenaje seguido por resección
dos meses después.
Colon proximal Resección con anastomosis primaria del intestino delgado con
el colon remanente; si las condiciones son desfavorables,
exteriorización de ambos extremos (ileostomia y fístula mucosa).
Colon distal Resección con colostomia terminal y cierre del extremo distal
(procedimiento de Hartmann)
o fístula mucosa.

Manejo de la cavidad peritoneal.- El propósi- yodopovidona ha demostrado efectos perju-


to fundamental es la remoción de las bacte- diciales y no debe ser empleado.
rias ubicadas en la cavidad peritoneal, redu-
ciendo la carga global de patógenos a fin de Drenaje abierto sin reoperación y plan de
prevenir infección intraabdominal recurrente. relaparotomía. En esta técnica la fascia no
La colocación de drenes es el tratamiento de se cierra después de la laparotomía, deja a la
escogencia para la evacuación de bacterias y cavidad peritoneal abierta, tratando el abdo-
pus de un absceso localizado: el dren es re- men como un solo gran absceso. Como forma
movido cuando el líquido infectado se reduce de cierre y protección de las asas intestinales
o desaparece. Un tubo de drenaje no drena la se utiliza la “bolsa de Bogotá”, una bolsa de
cavidad peritoneal libre, debido a que la fibrina vinilo de las soluciones intravenosas, original-
formara una pared alrededor del drén. Los mente descrita por O. Borráez del Hospital San
drenes pueden causar complicaciones secun- Juan de Dios de Bogotá. Sus ventajas teóri-
darias como erosiones intestinales o vascula- cas son el agresivo manejo de la infección, la
res y, por lo tanto, deben evitarse en los casos mejoría en la ventilación postoperatoria por
de peritonitis generalizada. reducción de la presión intraabdominal y la
facilidad de reoperaciones por sepsis persis-
Lavado con solución salina. Es el método tente. Las desventajas son la significativa in-
más simple y eficaz para el aseo general peri- cidencia de fístulas intestinales y de ulterior
toneal. El lavado peritoneal con el antiséptico hernia ventral.

812
CAPÍTULO XVII: SEPSIS ABDOMINAL

TABLA 8. RESUMEN DE TÉCNICAS QUIRÚRGICAS PARA EL MANEJO DE LA CAVIDAD PERITONEAL INFECTADA.


VENTAJAS Y DESVENTAJAS.

TÉCNICA VENTAJAS DESVENTAJAS


Lavados con solución salina Simple; remueve la mayoría del exudado Deja bridas de fibrina infectadas escon-
grosero; no tiene complicaciones, los anti- didas y organismosadherentes al meso-
bióticos sistémicos penetran muy bien el telio.
líquido peritoneal.
Lavados con antibióticos Igual a la solución salina, pero hay muerte Los antibióticos sistémicos penetran muy
extra de bacterias. bien el líquido peritoneal, no muestran
beneficios en animales o pacientes con
sepsis abdominal establecida.
Lavados con antibióticos Remoción continua de proliferación de or- Mas trabajo intensivo, algunas complica-
continuos Postoperatoriamente ganismos, mas baja mortalidad en ensayos ciones, no se han probado beneficios en
aleatorios. estudios prospectivos aleatorios.
Desbridamiento peritoneal Remoción de fibrina infectada; mas baja Consume mucho tiempo; no muestra be-
radical mortalidad en estudios controlados. neficios en ensayos prospectivos aleato-
rios.
Drenaje abierto sin reoperación Drenaje agresivo, mejoría en la ventilación; Hernia ventral; fístula intestinal; no ensa-
facilita la reexploración. yos prospectivos aleatorios.
Relaparotomia programada Drenaje agresivo; temprana remoción de Mucho trabajo intensivo; fístula intestinal
infección residual; mas baja mortalidad en no ensayos prospectivos aleatorios.
ensayos no aleatorios.

LECTURAS RECOMENDADAS

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postoperative peritonitis after anterior resection:

814
CAPÍTULO XVIII: DIARREA AGUDA

CAPÍTULO XVIII

Diarrea aguda

Fernando Sierra, MD
Jefe, Sección de Gastroenterología
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a diarrea aguda (DA) se define como el


cuadro caracterizado por la presencia de
deposiciones incrementadas en frecuencia
roinvasivos. El Clostridium difficile es el agente
causal en 20-30% de los casos.

(más de 2-3 en el día), con alteración en la


consistencia (generalmente líquidas), asocia- ESTRATEGIAS DIAGNÓSTICAS
das o nó a síntomas generales (fiebre, esca-
lofrío, náuseas o cólicos abdominales) y con Para la mayoría de los pacientes con cuadros
duración no mayor de una semana. de DA leve o moderada, no se indica ninguna
prueba diagnóstica.

En pacientes con cuadros severos o tóxicos,


EPIDEMIOLOGÍA o en el contexto de un cuadro de diarrea en
un paciente inmunodeprimido, es importante
Más del 95% de los casos de DA son autolimi-
realizar cultivos de las materias fecales para
tados y no necesitan ni pruebas paraclínicas
identificar patógenos bacterianos invasivos, en
ni tratamiento específico.
especial para E coli 0157:H7.
Ciertos síntomas clínicos (fiebre, cólicos abdo- Un solo cultivo es suficiente para identificar la
minales, sangre en las heces), signos (leuco- mayoría de patógenos que producen cuadros
citos en la materia fecal, sangre oculta, anemia de entero-invasividad; en cambio. En casos
y eosinofilia) y algunos aspectos del medio de diarrea por parásitos o Clostridium difficile,
ambiente del paciente donde potencialmente se requiere el cultivo de al menos tres mues-
adquiere la diarrea (hospitalización, uso de tras de materia fecal (Tabla No. 1).
antibióticos, quimioterapia, viajes al exterior)
incrementan la posibilidad de identificar el La endoscopia del colon es innecesaria en la
agente causal patógeno en 10-20% de los mayoría de los casos de DA. En pacientes con
casos. cuadros severos, donde no se logre el cultivo
del patógeno causal, o en casos que se pro-
Los cuadros de diarrea nosocomial casi nunca longuen más de dos semanas, se indica la
son producidos por bacterias o parásitos ente- realización del examen endoscópico.

815
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA No. 1 - CARACTERÍSTICAS OPERATIVAS DE LAS PRUEBAS DIAGNÓSTICAS EN LA DIARREA AGUDA

Pruebas Diagnósticas Sensibilidad, % Especificidad, % Likelihood Ratio


Resultado Positivo Resultado Negativo
Infección enteroinvasiva
Leucos en fecales 20-90 20-90 0,25-9,0 0,11-4,0
Sangre oculta 20-90 20-90 0,25-9,0 0,11-4,0
Infección parásitos
Examen O & P 80-90 80-90 4,0-5,0 0,10-0,20
EIA+ o DFA+ 90-95 95-99 18-95 0,05-0,11
Clostridium difficile
Cultivo fecales 95 95 19 0,05
Cultivos toxina tisular 67 99 67 0,33
EIA 70-95 95-99 14-95 0,05-0,32

*EIA = enzyme immunoassay (inmunoanálisis enzimático). DFA = direct fluorescent antibody (anticuerpo fluorescente directo).
Examen O & P: examen para huevos (ova) y parásitos.

RECOMENDACIONES los factores dietéticos que puedan pro-


longar la enfermedad.
Para el adecuado tratamiento del paciente con El suero de rehidratación oral, a base
diarrea aguda las siguientes son las recomen- de electrolitos con glucosa, debe ser
daciones propuestas: suministrado a todos aquellos pacien-
tes incapaces de mantener su estado
1. Ante la ausencia de fiebre, deshidratación de hidratación sólamente con dieta lí-
o hematoquezia, el manejo del paciente quida clara.
con DA debe estar más dirigido a controlar En pacientes con dolor abdominal se-
los síntomas que a proveer un diagnóstico vero tipo cólico se pueden prescribir en
y tratamiento específico y altamente depu- forma cuidadosa antidiarréicos a base
rado. Las razones para esta recomenda- de peptina, loperamida o difenoxilato, los
ción son: cuales pueden ayudar a retornar más
a) La gran mayoría de los pacientes tie- pronto a la normalidad, e incluso pueden
nen un cuadro clínico autolimitado que disminuir la pérdida de líquidos.
es fundamentalmente producido por vi- Es frecuente que los cuadros clínicos de
rus (agente Norwalk, Rotavirus). DA (vírales o parasitarios de intestino
b) Las pruebas para el diagnóstico etiológi- delgado) se acompañen de un déficit
co preciso (como cultivo de materia fe- transitorio (por semanas o meses) en la
cal o investigación fecal de huevos o actividad de la disacaridasa lactasa. Por
parásitos) pueden ser muy costosas. tal razón a todos los pacientes con el
c) Casi todas las enfermedades de causa cuadro de DA se les debe indicar una
no viral remiten espontáneamente en dieta carente de lactosa. Esta recomen-
una semana. Además, en las fases tem- dación evita un sinnúmero de contra-
pranas de la DA el tratamiento debe tiempos y gastos innecesarios en cua-
estar dirigido a prevenir o reducir la des- dros clínicos que se hacen prolongados
hidratación, aliviar los síntomas y evitar por dietas mal prescritas.

816
CAPÍTULO XVIII: DIARREA AGUDA

2) El examen coproscópico, en que se tiñe en pacientes que han recibido antibióti-


una muestra de materias fecales con el co- cos recientemente o que han consumi-
lorante de Wright, permite identificar en for- do agua no tratada. La bacteria es sen-
ma bastante adecuada la presencia de leu- sible a trimetropim-sulfa o ciprofloxacina.
cocitos; es de fácil ejecución, altamente dis- 5) Se debe sospechar diarrea seudomembra-
ponible, barato y con una razonable sensi- nosa por Clostridium difficille en pacientes
bilidad y especificidad (cerca de 75%) para que:
establecer el diagnóstico de diarrea invasi- a) desarrollan el cuadro diarreico entre los
va de origen infeccioso, ya sea bacteriana 7-30 días después de haber recibido tra-
o amibiana. Si el examen muestra menos tamiento con cualquier antibiótico (prefe-
de tres leucocitos por campo, se debe con- rencialmente cefalosporinas o clindami-
tinuar la terapia sintomática antes de indi- cina).
car el cultivo de materia fecal o sangre u b) hayan estado hospitalizados por más de
otras pruebas más costosas y complicadas 7 días.
como serían PCR o serología para parási- c) hayan sido tratados con quimioterapia
tos o virus exóticos o poco frecuentes. para lesiones malignas.
3) Si la diarrea sigue sintomática por más de d) tengan leucocitos, y/o moco y/o sangre
una semana se debe practicar un cultivo en las materias fecales. En estos pacien-
de materia fecal y, además, realizar sigmoi- tes se deben realizar cultivos fecales se-
doscopia con el fin de observar la mucosa lectivos para identificar la bacteria o in-
y ver la necesidad de tomar biopsias. Ante dicar el estudio con ELISA para identifi-
la sospecha de giardias (carácter clínico, car las toxinas. Ante cualquier sospecha
epidemiología local, etc.) se puede admi- se debe iniciar tratamiento empírico con
nistrar tratamiento empírico a base de me- metronidazol o vancomicina según los
tronidazol, ya que este parásito difícilmen- recursos locales.
te se visualiza en la materia fecal. 6) Se presenten con cuadros muy tóxicos de
4) Cuando se decide realizar cultivo de mate- DA (fiebre, deshidratación, sangre y abun-
ria fecal, en todos se debe indicar además dante moco en la materia fecal). Estos co-
un cultivo en medio selectivo para Campy- múnmente requieren hospitalización con
lobacter fetus subespecie jejuni debido a rehidratación y equilibrio de los electrolitos
que este microorganismo: por vía oral (en lo que más se pueda tole-
a) es la causa más común de diarrea en rar) o intravenosa, además de suministrar
adultos. antibióticos en forma empírica mientras se
b) puede asumir clínica y endoscópica- obtienen los resultados de los cultivos y
mente la apariencia de enfermedad exámenes específicos que se soliciten al
inflamatoria intestinal o de una diarrea ingreso. Es importante que a todos los pa-
seudomembranosa. cientes se les indique aislamiento entérico.
c) puede causar enfermedad que dura va-
rios meses, y
d) el tratamiento con eritromicina suele
LECTURAS RECOMENDADAS
acortar significativamente el curso de la
misma. 1. Barbut F, Leluan P, Antoniotti G, et al. Value of
La Aeromonas hydrophila es reconoci- routine stool cultures in hospitalized patients with
da actualmente como una causa impor- diarrhea. Eur J Clin Microbiol Infect Dis 1995;
tante de DA en adultos, particularmente 14:346-9.

817
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Bartlett JG. Pseudomembranous enterocolitis and 11. Massey BT, Black ER. Clinical parameters
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Fordtran JS, eds. Gastrointestinal Disease: Patho- (O&P) exam in medical inpatients. Gastroente-
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3. Bowman RA, Bowman JM, Arrow SA, et al. factors for Clostridium difficile carriage and C.
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dium difficile colitis: an efficient clinical approach
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818
CAPÍTULO XIX: COLITIS AMEBIANA

CAPÍTULO XIX

Colitis amebiana

Manuel Mojica Peñaranda MD.


Profesor titular de Gastroenterología
Universidad Libre, Barranquilla
Vicepresidente, Asociación Colombiana de Hepatología

Elisa Mojica Muñoz, MD


Hospital de Puerto Colombia
Barranquilla

EPIDEMIOLOGÍA

S e calcula que 50 millones de personas en


el mundo están infectadas por Entamoeba
histolytica, de las cuales 90% son asintomá-
unos pocos aparece la enfermedad. El perío-
do de incubación va de dos días a cuatro
meses. El ciclo de vida de la E. histolytica tiene
ticas. Cada año mueren 100,000 personas por dos fases: la primera se da con el quiste, que
causa de las complicaciones de la amibiasis. transmite la infección, y la segunda con el tro-
Anteriormente se creía que la cifra de infec- fozoíto, la forma móvil con capacidad de inva-
ción asintomática era de 500 millones de sión tisular. La E. histolytica entra al cuerpo al
personas, pero se ha visto que la gran mayo- ingerir agua o comida contaminada con los
ría de éstas presentaban infección por quistes tetranucleicos, el quiste se disuelve
Entamoeba dispar. La amibiasis es más fre- en el íleon terminal liberando ocho trofozoítos
cuente en Centro y Sudamérica, África y Asia. uninucleados por cada quiste, que avanzan
En Estados Unidos y otros países desarrolla- hasta el ciego y el colon, donde producen la
dos este tipo de infección es rara y si se pre- enfermedad.
senta, generalmente es porque el paciente ha
viajado a una zona endémica.
CUADRO CLÍNICO
Mediante el uso de técnicas diagnósticas se
puede diferenciar entre la infección por E.
histolytica y E. dispar, lo cual es importante Sintomatología
porque la última no es patógena y no presen- Dolor abdominal
Fiebre
ta respuesta inmunológica humoral ni enfer-
Diarrea con moco y sangre
medad invasiva. Más de una semana en aparecer los síntomas
Pérdida de peso

FISIOPATOLOGÍA
El espectro de manifestaciones clínicas es va-
La gran mayoría de los individuos son porta- riado. La gravedad de la infección depende
dores asintomáticos de los quistes y sólo en de las condiciones del individuo, de su esta-

819
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

do nutricional e inmunológico, de las condicio- nicas más graves de la disentería amibiana


nes sanitarias y de la calidad de vida. Los son la colitis necrotizante aguda y el me-
pacientes con desnutrición, los infantes, los gacolon tóxico, que ocurre en 0,5% de los ca-
ancianos, las mujeres embarazadas y las per- sos y se manifiesta como una dilatación agu-
sonas que reciben conticosteroides, están en da del colon. Cuarenta por ciento de los pa-
mayor riesgo de desarrollar enfermedad ful- cientes fallecen por causa de sepsis, a me-
minante con perforación intestinal. Ésta se nos que sea diagnosticado y tratado en forma
manifiesta por apariencia tóxica, abdomen dis- rápida.
tendido y signos de irritación peritoneal.
El ameboma es una forma de colitis crónica
La infección intestinal por Entamoeba histoly- localizada, puede causar obstrucción intesti-
tica puede clasificarse en invasora, o colitis nal y simular la sintomatología de un cáncer
amibiana, y en colonización asintomática sin de colon.
repercusiones clínicas. La E. dispar es res-
ponsable de 90% de la colonización intestinal
asintomática. La amibiasis invasora se desa- DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
rrolla en 10% de los pacientes infectados con
E. histolytica. Diferenciar la colitis amibiana de otras enfer-
medades infecciosas puede significar todo un
Las manifestaciones clínicas de la colitis ami- reto. La colitis amibiana puede presentar un
biana son dolor abdominal, disentería, depo- cuadro similar al de diversas entidades: shi-
siciones con moco y sangre, por lo general guelosis, enfermedad inflamatoria intestinal,
menos de 10 al día, flatulencia, lesiones ulce- tuberculosis intestinal, colitis isquémica, diver-
radas colónicas o perforaciones, ameboma ticulosis, malformaciones arteriovenosas o
(por granulación del tejido intestinal), megaco- cáncer colo-rectal.
lon tóxico, peritonitis, apendicitis amibiana y
fiebre en pocos casos. A diferencia de la disen- La colitis amebiana exhibe un inicio gradual
tería bacteriana, los síntomas aparecen gra- de la sintomatología (una o más semanas),
dualmente entre una y varias semanas. Gene- diferente al de la disentería bacteriana, en la
ralmente hay pérdida de peso. Las formas clí- cual el inicio de los síntomas es abrupto.

TABLA 1. COMPARACIÓN ENTRE COLITIS AMEBIANA Y DISENTERÍA BACTERIANA

Característica Colitis amebiana Disentería bacteriana


Viaje o retorno de un área endémica Sí No
Duración de los síntomas Más de 7 días 2-7 días
Diarrea 94-100% 100%
Prueba positiva para sangre oculta en heces 100% 40%
Dolor abdominal 12-80% 50%
Pérdida de peso Frecuente Poco frecuente
Fiebre mayor de 38ºC Minoría Mayoría

820
CAPÍTULO XIX: COLITIS AMEBIANA

AYUDAS DIAGNÓSTICAS Las pruebas de detección de antígenos como


ELISA se pueden utilizar en combinación con
Los métodos que ayudan en el diagnóstico el diagnóstico microscópico. La técnica más
son: microscopia y cultivo de heces, detección útil es la detección de anticuerpos antiamiba
de antígenos parasitarios, serología, PCR (re- y la prueba de ELISA para detectar la adheren-
acción en cadena de la polimerasa). cia del antígeno de la lectina de la amiba en
heces y plasma (Prueba E. histolytica II). La
Si la determinación de antígenos identifica co- serología es útil, porque más de 80% de los
lonización por E. dispar, no se requiere trata- pacientes tienen serología positiva; sin em-
miento. bargo, no distingue entre infección aguda y
crónica o recuperación de una infección agu-
La identificación por medio del microscopio es da, pero sí distingue entre infección por E.
la forma más común de diagnóstico en las histolytica y E. dispar: Si el resultado es ne-
áreas endémicas; sin embargo, no tiene bue- gativo, prácticamente se descarta la infección.
na sensibilidad ni especificidad, debido a que
no puede diferenciar entre E. histolytica y E. La PCR tiene una gran sensibilidad en la di-
dispar; igual sucede con el cultivo de heces. ferenciación de E. histolytica y E. dispar, pero
El cultivo de heces seguido de análisis isoenzi- con la limitante de ser muy costosa y requerir
mático es el patrón oro para el diagnóstico de personal entrenado. La colonoscopia con
infección por E. histolytica. Tiene muy poca toma de biopsias del borde de la úlcera es
utilidad clínica, ya que el resultado demora dos diagnóstica en 90% de los casos, es rápida
semanas y requiere ciertas condiciones es- de realizar y permite hacer el diagnóstico di-
peciales de laboratorio. ferencial con la enfermedad intestinal
inflamatoria.

TABLA 2. TÉCNICAS DE LABORATORIO

General Específico ¿Específico para Especimen Sensibilidad Especificidad


E. histolytica?
Microscopio Microscopio No Heces 30-50% Menor de 60%
Cultivo Cultivo/ isoenzima Sí Heces 30-60% Prueba de oro
Detección de Test E histolytica Sí Heces Mayor 95% Mayor 95%
antígeno II (ELISA)
Test E histolytica Sí Plasma Mayor 65% Mayor 90%II
II (ELISA)
Detección de Sí Saliva No datos No datos
antígeno (ELISA)
Pruebas DNA PCR Sí Heces Mayor 85% Mayor 90%

821
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Se pueden realizar colonoscopia o sigmoidos- terminar el tratamiento, se debe realizar de-


copia. Se prefiere la primera, debido a que la tección de antígeno parasitario en las heces.
infección puede ser focal y estar ubicada en
la válvula ileocecal o en el colon ascendente. El tratamiento ideal debe ser metronidazol y
Se debe aprovechar para tomar biopsias para luego continuar con un medicamento de ac-
identificación de trofozoítos. No se deben uti- ción luminal; no se deben prescribir ambos al
lizar enemas ni catárticos para preparar a es- tiempo por la intolerancia gastrointestinal que
tos pacientes, porque pueden cambiar la mor- producen al usarse en combinación. Los efec-
fología de las lesiones y no ser entonces iden- tos secundarios del metronidazol incluyen ce-
tificables durante el examen. falea, anorexia, sabor metálico, vómito, los
cuales se presentan en un tercio de los pacien-
tes. La dosis recomendada es 750 mg cada
TRATAMIENTO ocho horas por 10 días; si se presentan efec-
tos secundarios se puede disminuir a 500 mg
Es posible que se requieran múltiples trata- cada ocho horas. Luego se debe continuar con
mientos para erradicar la infección. Los medi- un medicamento de acción luminal para preve-
camentos antiamibianos se pueden dividir en nir recaídas. La mejoría clínica resulta eviden-
dos grupos: los de acción luminal y los de ac- te por la resolución de la diarrea a los dos días
ción tisular. La infección asintomática puede de iniciado el tratamiento. El medicamento se
ser tratada con los medicamentos de acción debe descontinuar si se desarrolla vértigo,
luminal, pero si se evidencia E. dispar, no se encefalitis o neutropenia.
requiere tratamiento alguno. Los medicamen-
tos de acción luminal son el iodoquinol, el Se puede administrar metronidazol a mujeres
furoato de diloxanida y la paromomicina. El embarazadas que presentan enfermedad se-
iodoquinol tiene más toxicidad gastrointestinal vera, valorando siempre el riesgo-beneficio,
que el furoato de diloxanida. La paromomicina, ya que ellas tienen una susceptibilidad mayor
un aminoglucósido no absorbible, es la droga a desarrollar enfermedad fulminante.
de elección en mujeres embarazadas, pero
tiene como efecto secundario la diarrea. Si se sospecha perforación intestinal se debe
adicionar un antibiótico de amplio espectro.
Para la infección invasora el tratamiento de El ameboma responde al tratamiento médico
elección es el metronidazol, que exhibe una en la mayoría de los casos y sólo en unos
tasa de curación de 90%. También se utilizan pocos requieren cirugía. Si se presenta mega-
tinidazol, tetraciclina y eritromicina. Para con- colon tóxico, es necesaria la colectomía par-
firmar la erradicación de la infección, luego de cial o total.

822
CAPÍTULO XIX: COLITIS AMEBIANA

TRATAMIENTO DE LA COLITIS AMEBIANA

Tipo de infección Medicamento Características Dosis de adulto Dosis pediátrica


Asintomática Paromomicina Puede ser usada durante el embarazo. 25-35 mg/kg/día en 3 25-35 mg/kg/día en
Tiene ototoxicidad y nefrotoxicidad. Efec- dosis por 7 días. 3 dosis por 7 días.
tos secundarios gastrointestinales.
Tetraciclina Efectos gastrointestinales frecuentes. No 250 mg cada 6 horas No
administrar a niños ni a mujeres emba- por 10 días.
razadas.
Iodoquinol Con el uso a largo plazo neuritis óptica y 650 mg cada 8 horas 30-40 mg/kg/día
atrofia. por 20 días. (máx. 2g) en tres
dosis por 20 días.
Furoato de Pobre absorción gastrointestinal, pocos 500 mg cada 8 horas 20 mg/kg/día por 10
diloxanida efectos gastrointestinales. por 10 días. días.
Colitis amebiana Metronidazol Efectos secundarios: anorexia, náusea, vó- 500-750 mg cada 8 35-50 mg/kg/día en
leve a moderada mito, sabor metálico, neuropatía periférica. horas por 10 días. 3 dosis por 10 días.
Tinidazol Menos efectos secundarios que metro- 600-800 mg cada 12 50-60 mg/kg/día
nidazol. horas por 5 días. (máx 2g) por 3 días.
Colitis amebiana Metrodinazol Efectos secundarios: anorexia, náusea, 500-750 mg cada 8 35-50 mg/kg/día en
severa vómito, sabor metálico, neuropatía horas por 10 días. tres dosis por 10
periférica. días.

PRONÓSTICO LECTURAS RECOMENDADAS

El pronóstico en la mayoría de los casos de 1. Abd-Alla MD, Ravdin JI. Diagnosis of amoebic coli-
colitis amibiana es bueno y sólo en algunos tis by antigen capture ELISA in patients presen-
ting with acute diarrhoea in Cairo, Egypt. Trop Med
surgen complicaciones. El comienzo del tra-
Int Health 2002: 7:365-370.
tamiento antibiótico oportuno ha reducido el 2. Dunzendorfer T, Kasznica J. Amebic and/or ulcera-
porcentaje de complicaciones. tive colitis? Gastrointest Endosc 1998; 48:450-451.
3. Ebecken R. Amebic colitis simulating ulcerative
colitis. Gastrointest Endosc 2000; 51:641-642.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN 4. Espinosa-Cantellano M, Martinez-Palomo A.
Pathogenesis of intestinal amebiasis: from molecu-
La prevención y control de la infección por ami- les to disease. Clin Microbiol 2000; 13:318-331.
5. Leung J, Chin A. Amebic colitis. Gastrointest
ba requiere educación de la población sobre
Endosc 2002; 56:732.
el manejo individual y público de las excretas, 6. Linder E, Isaguliants M, Olsson M, et al. Amebiasis
higiene y manipulación de los alimentos, pro- in León, Nicaragua: Entamoebae in stool exami-
visión de agua potable, tratamiento quimiopro- nation and identification of amebic liver abscess
filáctico de los portadores de quistes asintomá- cases by serology and PCR. Arch Med Res 1997;
ticos, educación a grupos sexuales de alto 28:314-316.
riesgo sobre la transmisión fecal-oral, lavado 7. Yoshikawa I, Murata I, Yano K, et al. Asymptomatic
de frutas y verduras con desinfectante antes amebic colitis in a homosexual man. Am J
Gastroenterol 1999; 94:2306-2308.
de consumirlas.

823
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XX

Diverticulitis aguda

Rafael Garcia Duperly, MD


Sección de Cirugía de Colon y Recto
Clínica Reina Sofía
Bogotá

TERMINOLOGÍA

D ivertículo: es la prolapso de la mucosa a


través de la pared muscular del intestino
grueso (colon).
nen. Alrededor de 20% de los pacientes con
diverticulos van a presentar en algún momento
un episodio de diverticulitis aguda.

Diverticulosis: implica la presencia de uno o


más divertículos sin causar sintomatología. ETIOPATOGENIA
Enfermedad diverticular: incluye todos los ca- Se origina por dos factores principales que son:
sos en que los divertículos causan manifes- 1. Aumento en la presión intraluminal
taciones clínicas como sangrado o inflamación. 2. Debilidad en la pared intestinal

Diverticulitis: se produce por micro o macro El estreñimiento juega un papel por retención
perforación de un divertículo, la cual puede del bolo fecal, el cual causa aumento de la
ser simple o complicada, bajo la forma de per- presión intraluminal, lo que produce hiperseg-
foración libre, abscesos, peritonitis generali- mentación y herniación de la mucosa a través
zada, obstrucción, fístulas a otros órganos o del punto más débil, que es la entrada de los
sangrado. vasos a través de la muscular, entre las arte-
ria lateral y mesentérica.

EPIDEMIOLOGÍA Cuando se ocluye el cuello del divertículo se


produce aumento de la presión en la luz y so-
A menudo es asintomática, siendo su inciden- breinfección, que causa micro o macroperfora-
cia baja en zonas rurales de Africa y América ción que lleva a la diverticulitis aguda.
Latina y ciertas zonas de Asia y alta en los
países occidentales. La relación mujeres a Se han utilizado múltiples clasificaciones para
hombres es de 3:2; es más frecuente en hom- estadificar la enfermedad: la clínica, de la Uni-
bres por encima de los 50 y en mujeres por versidad de Minnesota y la de Hinchey que
encima de los 70 y rara en menores de 20 utiliza la tomografía axial computadorizada pa-
años. 20% de la población por debajo de 50 ra clasificarla en estadíos, siendo las dos más
años presenta divertículos mientras que 85% utilizadas.
de las personas por encima de los 80 los tie-

824
CAPÍTULO XX: DIVERTICULITIS AGUDA

CLASIFICACIÓN CLÍNICA Para poder estadificar la enfermedad y esta-


DE MINNESOTA blecer su manejo se recomienda realizar pro-
cedimientos diagnósticos adicionales como los
0 No inflamación. siguientes:
I Inflamación crónica.
II Inflamación aguda con o sin microabscesos.
III Absceso pericolítico o mesentérico. ENDOSCOPIA
IV Absceso pélvico.
V Peritonitis fecal o purulenta. Contraindicada en la fase aguda, ya que pue-
de convertir una perforación contenida en una
perforación libre, sea por el mismo instrumento
CLASIFICACIÓN o por la insuflación de aire para el procedimien-
ESCANOGRÁFICA DE HINCHEY to. Se realiza después de terminado el proce-
so agudo para diferenciarlo de enfermedad
Estado I Diverticulitis asociada con absce- inflamatoria intestinal, lesión tumoral o para
so pericólico. evaluar una estrechez. Ocasionalmente hay
Estado II Diverticulitis asociada con absceso necesidad de realizarla en fase aguda cuando
distante (pélvico o retroperitoneal). hay alta sospecha de lesión neoplásica; en
Estado III Diverticulitis asociada a peritonitis este caso se deberá insuflar un mínimo posi-
purulenta. ble de aire.
Estado IV Diverticulitis asociada con perito-
nitis fecal.
ESTUDIOS CON CONTRASTE
Los casos repetidos de inflamación causan fi-
brosis de la pared del colon y estrechez de la Enema con contraste hidrosoluble
luz. Ocasionalmente los abscesos invaden la
pared de los órganos vecinos causando fístu- Es un estudio simple y seguro en pacientes
las; las más comunes son a la vejiga y a la con sospecha de diverticulitis. Tiene una sen-
vagina. sibilidad de 94%, especificidad de 77% con
falsos negativos de 2-15%. Los principales
hallazgos son diverticulosis con o sin espas-
MANIFESTACIONES CLÍNICAS Y mo; peridiverticulitis, en que se observa una
DIAGNÓSTICO clara irregularidad del sigmoide con grandes
estrecheces o con obstrucción y extravasación
La mayoría de los pacientes son asintomáti- del medio de contraste con formación de masa
cos. En la diverticulitis aguda el principal sín- pericólica, absceso u obstrucción.
toma es dolor en el cuadrante inferior izquier-
do del abdomen (con una frecuencia de 93- Enema de bario doble contraste
100%) seguido de fiebre (57-100%) y leuco-
citosis (69-83%). Puede palparse masa en el Da un mejor delineamiento de la mucosa pero
examen pélvico o rectal. En algunos casos se debe ser realizado después de que la inflama-
presentan síntomas urinarios como disuria, ción local haya cedido. Tiene una especifici-
polaquiuria y tenesmo vesical por vecindad a dad de 86%. Está contraindicado en casos de
la cúpula de la vejiga; 85% de los episodios neumoperitoneo o de inestabilidad hemodi-
ocurre en el sigmoide. námica.

825
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Es importante anotar que estos medios diag- 1. Carcinoma.


nósticos no determinan si existe inflamación 2. Colitis ulcerativa.
o no, pues tan solo evidencian la presencia 3. Enfermedad de Crohn.
de divertículos o de algún tipo de complica- 4. Colitis isquémica.
ción como fístulas o estenosis. 5. Enfermedad pélvica inflamatoria.
6. Pielonefritis.
Ultrasonografía 7. Apendicitis.

Tiene una sensibilidad de 84-98%, especifici- El más importante para diferenciar es el carci-
dad de 80-97%, con un valor predictivo po- noma, y para ello tienen gran valor los estu-
sitivo de 76%. Es un procedimiento de valor dios radiológicos y endoscópicos.
diagnóstico y terapéutico para drenaje percu-
táneo, con una exactitud para detectar abs-
cesos de 90-97%. COMPLICACIONES
DE LA DIVERTICULITIS AGUDA
Los hallazgos principales son: engrosamien-
to de la pared e hiperecogenicidad del colon La principal complicación es el absceso y/o
por inflamación; también se la realiza para ex- el flegmón que se presentan en 10-50% de
cluir patología pélvica o ginecológica. La prin- los pacientes con diverticulitis. La obstrucción
cipal desventaja es que no diferencia entre en- del colon se presenta en 10% de los casos y
fermedad de Crohn, carcinoma, linfoma o di- se origina en los episodios repetidos de diver-
verticulitis aguda. También, que depende mu- ticulitis con formación de fibrosis y disminu-
cho de la habilidad del operador. ción del calibre de la luz.

Tomografía axial computarizada (TAC) Los abscesos pericólicos también producen


obstrucción por comprensión extrínseca. Otra
Es el mejor método diagnóstico y se utiliza de las complicaciones es la formación de fístu-
como examen inicial en el paciente en quien las que se producen por erosión del absceso
se sospecha diverticulitis aguda. Localiza y hacia un órgano vecino, más comúnmente a
estadifica la enfermedad. Sirve para drenaje la vejiga y a la vagina. Rara vez se presenta
percutáneo de colecciones y para el segui- sangrado como complicación.
miento posterior. Tiene sensibilidad de 90-
95%, especificidad de 72% y falsos negativos
de 7-21%. Diagnostica el engrosamiento de TRATAMIENTO
la pared del colon cuando está por encima de
los 4mm, lo mismo que los cambios en la gra- El manejo depende del estado en que se en-
sa pericólica. cuentre el paciente con diverticulitis aguda. Los
estados Minesota I al IV y Hinchey I - II son de
manejo médico, mientras el Minesota V y los
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Hinchey III y IV son de manejo quirúrgico.

Dependiendo de la forma de presentación se


deberá hacer diagnóstico diferencial con un
grupo de patologías muy variables como son:

826
CAPÍTULO XX: DIVERTICULITIS AGUDA

MANEJO MÉDICO yor diferencia y que se debiera seguir con los


mismos parámetros. Nuestro pensamiento es
El manejo inicial es con reposo intestinal, lí- que estos pacientes tienen una perspectiva
quidos endovenosos y antibióticos para Gram de vida más larga y por lo tanto mayor proba-
negativos y anaerobios. bilidad de nuevos episodios con mayor riesgo
quirúrgico, por lo cual les recomendamos ope-
Cuando se diagnostica un absceso debe ser rarse después del primer episodio.
drenado por vía percutánea, idealmente dejan-
do un catéter tipo Malekot o similar para dre- Se recomienda llevar a cabo la resección elec-
naje continuo, porque la incidencia de repro- tiva 6-8 semanas después del episodio agu-
ducción del absceso es alta. do, cuando la inflamación haya cedido. El pro-
cedimiento de elección es la resección prima-
La presentación de un segundo episodio des- ria con anastomosis.
pués de una adecuada respuesta al tratamien-
to médico es menor de 30%, pero después En el episodio agudo, la indicación absoluta
de un tercer episodio es entre 58–90%. La de cirugía es en la clasificación de Minesota
incidencia de complicaciones también aumen- el estado V, y en la de Hinchey los III y IV, o
ta con los subsiguientes episodios. sea la perforación libre con peritonitis puru-
lenta o fecal y el paciente con absceso que
no responde al tratamiento médico.
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
Existen múltiples técnicas quirúrgicas, pero los
20%de los pacientes que han presentado principios básicos deben ser control de la sep-
diverticulitis aguda terminan en cirugía. sis, resección del tejido enfermo, restauración
de la continuidad intestinal con ostomía de pro-
Las indicaciones para cirugía electiva en en- tección o sin ésta; esas técnicas son:
fermedad diverticular, según la Sociedad Ame-
ricana de Colon y Recto son: 1. Procedimiento en tres tiempos: inicialmente
se realiza colostomía del transverso y dre-
1. Dos o más ataques de diverticulitis asocia- naje del absceso, posteriormente resección
dos con dolor abdominal, fiebre, masa ab- del segmento con o sin anastomosis y por
dominal y leucocitosis. último cierre de la colostomía. Rara vez
2. Ataque de diverticulitis con extravasación está indicado.
del medio de contraste, síntomas obstruc- 2. Procedimiento en dos tiempos: es el pro-
tivos o urinarios. cedimiento de elección cuando existe per-
3. Más de dos episodios confirmados de di- foración y peritonitis porque se reseca com-
verticulitis aguda severa que requieran hos- pletamente el segmento enfermo y se lo-
pitalización. gra un mejor control del proceso séptico.
4. Pacientes inmunocomprometidos o consu-
midores crónicos de corticoides. En este grupo existen varias alternativas:
5. Un solo ataque de diverticulitis en perso-
nas menores de 50 años. • Exteriorización con resección, colostomía
y fístula mucosa.
Esta última indicación es muy discutible y hay • Resección con colostomía y cierre del mu-
múltiples autores que piensan que no hay ma- ñón rectal (Procedimiento de Hartman).

827
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Resección con anastomosis primaria y enema: prospective evaluation of 420 patients. Dis
ostomía de protección. Colon Rectum 2000; 43:1363-7.
• Resección con anastomosis primaria. 2. Farrell RJ, Farrell JJ, Morrin MM. Diverticular
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CIRUGÍA LAPAROSCÓPICA Operative treatment of acute complications of diver-
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Se viene utilizando cada vez más para el ma- after sigmoid resection. Br J Surg 2001; 167:35-9.
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Un 7% de los pacientes presenta enfermedad
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ren una nueva resección. La principal causa analysis. Dis Colon Rectum 2001; 44:699-703.
es la resección incompleta del sigmoide y la 11. Stollman NH, Raskin JB. Diagnosis and manage-
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828
CAPÍTULO XXI: DOLOR ANAL AGUDO

CAPÍTULO XXI

Dolor anal agudo

Eduardo Londoño Schimmer MD, FACS, MASCRS


Departamento de Cirugía.
Servicio de Cirugía de Colon y Recto
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN ABSCESO ANAL

D olor en el área ano-rectal, usualmente de


menos de 72 horas de evolución, severo
e incapacitante, que obliga al individuo a con-
Definición: colección purulenta localizada en
alguno de los compartimentos anatómicos del
área perineal.
sultar. Puede estar acompañado de sensación
de masa anal, sensación de peso a nivel peri- Incidencia: es más frecuente en varones (2:1).
neal o síntomas y signos sistémicos.

Es una patología muy frecuente y representa CLASIFICACIÓN DE ACUERDO


un alto porcentaje (>30%) de las consultas de A LA LOCALIZACIÓN ANATÓMICA:
coloproctología de urgencias (FSFB, informa-
ción no publicada, 2003). Teniendo en cuenta Interesfintérico: se localiza en el plano entre
la morbilidad que puede derivarse de una eva- el esfínter interno y el externo. Puede exten-
luación incorrecta es necesario conocer las derse en dirección caudal y dar lugar a un
diferentes patologías para establecer un diag- absceso perianal, en dirección proximal que
nóstico y un tratamiento precoz. da lugar a un absceso intermuscular alto (muy
poco frecuente), en dirección proximal y late-
ral que da lugar a un absceso supraelevador,
ETIOLOGÍA o en dirección lateral que da lugar a un abs-
ceso isquiorrectal.
Las causas principales de dolor anal agudo
son: Perianal: se origina en la extensión caudal
de un absceso interesfintérico, a lo largo del
• Absceso anal. plano formado por los dos esfínteres. Es el
• Prolapso hemorroidal agudo. más frecuente.
• Trombosis hemorroidal.
• Fisura anal. Isquiorrectal: se origina en la extensión lateral
• Procidencia con sufrimiento intestinal. de un absceso interesfintérico. La fosa isquio-
• Cuerpo extraño en ano. rrectal está limitada por el tejido celular subcutá-
• Endometrioma. neo perianal, el esfínter externo, el elevador del
• Trauma. ano y el isquion. Es el segundo en frecuencia.

829
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Supraelevador: se origina en la extensión DIAGNÓSTICO


proximal y lateral de un absceso interesfin-
térico o bien a partir de un absceso intrapélvico Clínico: Síntomas
(i.e., divertículo perforado). La fosa isquiorrec- Tacto rectal
tal está limitada por la pared del recto, el re- En caso de duda: Examen anal bajo aneste-
pliegue peritoneal y el elevador del ano. sia y/o resonancia magnética (RM) del piso
pélvico y/o endosonografía anal.

PRESENTACIÓN CLÍNICA En pacientes con diagnóstico de absceso


supraelevador se debe realizar una tomografía
SÍNTOMAS axial computarizada (TAC) abdomino-pélvica.

Dolor anal agudo, que puede ser pulsátil. Pue-


de existir secreción purulenta transanal o pe- TRATAMIENTO
rianal, sensación de masa y estreñimiento re-
ciente. El paciente puede estar febril y referir Todo paciente con diagnóstico de absceso
escalofrío. En casos avanzados o en pacien- anal debe ser sometido a drenaje quirúrgico
tes inmunosuprimidos puede haber compro- de urgencia.
miso sistémico.
Esta indicada la utilización de antibiótica en:

SIGNOS 1. Pacientes inmunosuprimidos.


2. Pacientes con severa celulitis.
Absceso interesfintérico:
3. Pacientes con enfermedades concomitantes.
Tacto rectal: masa palpable, dolorosa.

Absceso perianal:
Masa renitente. NUNCA EL ANTIBIÓTICO DEBE SUSTITUIR
Rubor. A UN DRENAJE QUIRÚRGICO ADECUADO
Calor.
Edema piel. Tipo de antibióticos: contra anaerobios y Gram
Temprano ningún signo. negativos (i.e., clindamicina-aminoglicósido,
Tacto rectal: no demuestra alteración, ni masa. metronidazol-aminoglicósido). Si existe la sos-
pecha clínica de que el paciente está desa-
Absceso isquiorrectal: rrollando una gangrena de Fournier, se debe
Edema de piel perianal. agregar penicilina cristalina.
Tardío: masa, rubor, calor.
Tacto rectal: dolor, masa renitente. Temprano.
es el único hallazgo.
Puede ser bilateral (en herradura). TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
Absceso supraelevador: Absceso interesfintérico
Tacto rectal: masa dolorosa por encima del Examen bajo anestesia general o regional.
elevador del ano. Drenaje amplio del espacio interesfintérico.
Tardío: extensión isquiorrectal. Tomar muestra para análisis bacteriológico.
Signos de proceso intra-abdominal o pélvico. Buscar posibles sitios de drenaje.

830
CAPÍTULO XXI: DOLOR ANAL AGUDO

Absceso perianal trata la fístula. Excepcionalmente se utiliza una


Drenaje bajo anestesia local, general o regional. hebra de prolene o de seda para marcar el
Drenaje a través de la piel. trayecto.
Tomar muestra para análisis bacteriológico.
Explorar cavidad digitalmente, romper septos.
Resecar bordes de piel (opcional: enviar a PROLAPSO HEMORROIDAL AGUDO
patología).
Definición: prolapso agudo del componente
Absceso isquiorrectal hemorroidal interno, con exposición de la mu-
Drenaje bajo anestesia general o regional. cosa y diferentes grados de edema de la mis-
Drenaje a través de la piel. ma. Desde edema simple, hasta ulceración y
Tomar muestra para análisis bacteriológico. gangrena de acuerdo a la gravedad. Concomi-
Explorar digitalmente la cavidad, romper septos. tantemente puede existir trombosis parcial.
Resección amplia bordes de piel (opcional:
enviar a congelación). Incidencia: Ligeramente más frecuente en las
Descartar absceso contralateral (en herradura). mujeres, debido a su aparición durante el
embarazo y el puerperio.
Absceso supraelevador
Drenaje bajo anestesia general o regional.
Drenaje a través de la pared rectal. DIAGNÓSTICO
Opcional: colocación catéter de Malecoth
transrectal. Clínica: dolor anal agudo, usualmente luego
Si existe extensión isquiorrectal, drenaje a tra- de una deposición difícil por estreñimiento, he-
vés de la piel. ces pétreas o pujo importante, o bien luego
Tomar muestra para análisis bacteriológico. de un episodio diarréico agudo (por ej., luego
Manejo de condición intra-abdominal o pélvica de ingesta de vino o champaña).
demostrada.
• Sensación de masa, en ocasiones pulsátil.
Si se diagnostica una extensión en herradura, • Sensación de peso, con dolor progresivo.
drenar ambas fosas isquiorrectales por sepa- • Imposibilidad de reducir la masa digital-
rado y si es necesario, realizar incisiones an- mente.
teriores y posteriores comunicando las dos • Imposibilidad o dificultad para sentarse.
laterales para favorecer drenaje completo. • Escalofrío.

En los casos poco frecuentes de gangrena de Examen físico: protrusión de la mucosa he-
Fournier, realizar drenaje amplio del absce- morroidal, con brillo de la mucosa compatible
so, desbridamiento de todo el tejido desvitali- con edema; puede haber algunos sitios con
zado, sacrificando incluso estructuras como trombos visibles a trasluz, pero usualmente
el esfínter anal externo, y realizar colostomía es parcial. Dolor severo a la palpación del o
derivativa. Mantener seguimiento estricto y los paquetes prolapsados. Si el edema es
realizar desbridamiento a necesidad. severo se ven sitios con ulceración de la mu-
cosa, con sangrado oscuro escaso, y si la pre-
En los casos en que se descubre concomitan- sentación es más grave, signos de isquemia
temente un trayecto fistuloso, usualmente se avanzada y gangrena, con olor pútrido.
drena el absceso y en un segundo tiempo se

831
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO TROMBOSIS HEMORROIDAL


Depende de la presencia o no de isquemia. Definición: presencia de un trombo que com-
La gran mayoría de los pacientes presenta promete el paquete hemorroidal, usualmente
únicamente edema (90%). El tratamiento es el componente externo. En muchos casos no
médico y consiste en: se encuentra un factor que precipite el desa-
rrollo de esta patología.
• Si hay estreñimiento, ablandadores fecales
(por ej., psyllium VO), con o sin el uso de Incidencia: similar en ambos sexos.
laxantes como la lactulosa por vía oral.
• Baños de asiento en agua tibia (se ha con-
firmado que disminuye la presión a nivel DIAGNÓSTICO
del esfínter interno, permitiendo el retorno
venoso), mínimo 6-8 veces al día por 10 Clínica: dolor anal agudo, que usualmente es
minutos cada vez. progresivo durante las primeras 48 a 72 ho-
• Bañarse con agua tibia, sin jabón, luego ras. Existe sensación de masa dolorosa y en
de la deposición. muchos casos el paciente puede establecer
• Colocación de gasa húmeda en agua fría con claridad el cuadrante doloroso. No existe
(al clima, no helada ni usar hielo, porque compromiso sistémico. En el examen físico
produce aumento de la presión esfinteriana se observa una masa perianal, azulada, muy
y espasmo). dolorosa a la palpación.
• Analgesia; en pacientes embarazadas o
lactando únicamente acetaminofen.
• Nunca intentar la reducción digital.
TRATAMIENTO
• Control ambulatorio a las 24 y 72 horas de Depende del tiempo de evolución de la enfer-
la primera visita para evaluar evolución. medad. Si el paciente consulta por severo
dolor en las primeras 24-72 horas, está indi-
En el caso de que exista isquemia con des- cada, idealmente, la hemorroidectomía exter-
prendimiento y ulceración de la mucosa, se na, bajo anestesia local, que incluya el trombo.
debe hospitalizar al paciente y además del tra- Sin embargo, en manos inexpertas es prefe-
tamiento médico anotado, se deben iniciar an- rible practicar una trombectomía (drenaje del
tibióticos de amplio espectro tales como metro- trombo) bajo anestesia local. La ventaja de la
nidazol-ciprofloxacina o ampicilina-sulbactam, hemorroidectomía externa formal es que evi-
bien por vía oral si no hay compromiso sisté- ta la recurrencia del trombo. En los pacientes
mico, o por vía venosa si existe reacción infla- que consultan luego de 72 horas, el manejo
matoria sistémica (leucocitosis u otro). usualmente es médico, similar al anotado para
el manejo del prolapso hemorroidal agudo, con
Si existe gangrena se deben iniciar antibióticos el cual se logra la resolución de la sintomato-
de inmediato por vía venosa y el paciente debe logía en más de 90% de los casos.
ser llevado a cirugía para practicar desbrida-
miento amplio, reconociendo la morbilidad
asociada (estenosis anal postoperatoria o le- FISURA ANAL AGUDA
sión del esfínter). El riesgo de la gangrena
hemorroidal es la piemia portal, entidad que Definición: úlcera lineal en el canal anal, que
se asocia con alta morbi-mortalidad. se extiende distal a la línea dentada hasta el

832
CAPÍTULO XXI: DOLOR ANAL AGUDO

margen cutáneo del ano. La mayoría se loca- anal interno. Se deben dar indicaciones dieta-
liza en la línea media (posición 11-1, 5-7 del rias (dieta rica en fibra), ablandadores fecales
reloj). y si es necesario laxantes. Se debe iniciar un
programa de baños de asiento en agua tibia,
Incidencia: Similar en ambos sexos, pero la 6-8 veces al día por 10 minutos cada vez, y
fisura anterior es más frecuente en las lavarse al defecar. En algunos casos, si el do-
mujeres. lor persiste a pesar de estas medidas, se ha
utilizado nifedipina tópica con excelentes resu-
ltados. El paciente debe ser controlado en for-
DIAGNÓSTICO ma ambulatoria y usualmente a las 4 - 8 se-
manas debe haber cicatrización completa.
Clínico: dolor anal agudo tipo ardor o “espas-
mo”, que usualmente ocurre luego de la expul-
sión de un bolo de materia fecal dura, de un PROLAPSO RECTAL AGUDO
diámetro mayor al que se obtiene al dilatar el
ano en el momento de la expulsión, y la sensa- Definición: salida de todas las capas del rec-
ción inmediata de ardor anal, sensación de to a través del ano (procidencia), que ocurre
cortadura y sangrado fresco. Algunos consi- en forma aguda después de una deposición y
deran que la hipertonía del esfínter anal inter- que no es susceptible de reducción manual
no es el primer evento para que se desarrolle por parte del enfermo.
la fisura, y que el paso del bolo fecal pétreo o
de gran tamaño sólamente contribuye a que Incidencia: Mayor en mujeres mayores de
se desarrolle el problema. Otros estudios han 50 años.
demostrado una perfusión límite del área, lo
que contribuye a que el proceso de cicatriza-
ción no sea el más adecuado. DIAGNÓSTICO
Examen físico: se observa una solución de Clínico: prolapso agudo que condiciona do-
continuidad (cortadura) a nivel del margen lor agudo, e imposibilidad de reducción ma-
anal, usualmente superficial, sin exposición de nual, por lo cual el paciente, en general, con-
las fibras del esfínter interno; al separar los sulta en forma precoz.
glúteos el paciente manifiesta ardor severo.
En algunos casos de fisura crónica (evolución • Ocurre después de una deposición.
mayor a seis semanas) pueden desarrollarse • En la mayoría de pacientes hay anteceden-
síntomas de agudización como los anotados tes de procidencia que se reduce manual-
y signos de cronicidad como mariscos anales mente luego de la deposición.
satélites y exposición de las fibras del esfín- • Evacuación abundante de moco; puede
ter interno. presentarse sangrado fresco cuando al no
poderse reducir el prolapso ocurre isque-
mia y desprendimiento y ulceración de la
TRATAMIENTO mucosa.
• Si el cuadro progresa puede ocurrir gan-
El tratamiento consiste en lograr una deposi- grena y necrosis del segmento prolapsado
ción blanda, romper el ciclo de materia fecal (compromiso sistémico, alta morbi-morta-
dura, dolor anal y espasmo reflejo del esfínter lidad).

833
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• En el examen se observa la procidencia con DIAGNÓSTICO


mucosa que forma círculos concéntricos,
y eritema intenso de la mucosa, con ede- Clínico: dolor anal agudo muy intenso, súbito
ma. Si hay progresión se observan zonas en el momento de la defecación y que persis-
de la mucosa con ulceración y finalmente te, lo cual lleva al paciente de inmediato a ur-
signos de gangrena y mal olor. gencias. Se debe sospechar y preguntar al pa-
ciente sobre su ingesta de los últimos 2 días.

TRATAMIENTO • Puede presentar fiebre y escalofrío.


• Puede existir mínimo sangrado por vía anal.
De inmediato se debe intentar la reducción
manual, utilizando abundante cantidad de lido- En el examen físico el paciente se encuentra
caína jalea, la cual se aplica sobre la superfi- muy álgico, existe severo espasmo anal, y si
cie del prolapso (mucosa) y mediante la utiliza- es posible practicar el tacto rectal, se encuen-
ción de las dos manos se debe, lentamente, tra usualmente el cuerpo extraño. Se debe
reducir la procidencia. Esto se logra en la gran tener sumo cuidado al hacer el tacto para que
mayoría de pacientes. Si esto no es posible, el examinador no sufra un corte o herida en
se debe llevar el paciente a salas de cirugía y su dedo. La política de nuestro servicio es rea-
bajo anestesia general o regional reducir el lizar un examen anal bajo anestesia, retirar el
prolapso de la misma manera. Personalmen- cuerpo extraño y drenar el sitio del empala-
te prefiero hospitalizar al paciente luego del miento de dicho cuerpo extraño, ya que usual-
procedimiento y administrar antibióticos intra- mente se desarrolla un absceso en el sitio
venosos durante 48 horas, considerando el donde se produce la ruptura de la pared.
riesgo de bacteremia. Se deben prescribir
ablandadores fecales. Cuando no es posible
reducir el prolapso mediante estas maniobras ENDOMETRIOMAS DEL ANO
o bien cuando hay signos de sufrimiento por
isquemia avanzados o de gangrena, se debe Definición: Implantes de endometriosis en el
practicar una rectosigmoidectomía por vía canal anal (piel, tejido celular subcutáneo o
perineal (procedimiento de Altemeir). esfínter anal), usualmente en la cicatriz de una
antigua episiotomía. Es una causa poco fre-
cuente de dolor anal agudo pero debe consi-
CUERPOS EXTRAÑOS EN ANO derarse en el diagnóstico diferencial.

Esta sección se refiere a cuerpos extraños (por


ej., huesos de pollo, palillos, espinas de pes- DIAGNÓSTICO
cado) que han sido ingeridos por el paciente
y que en el momento de la defecación se cla- Clínico: usualmente el dolor es cíclico, debi-
van a nivel del canal anal. Se excluyen los do a que este tejido está sometido a la influen-
causados por trauma externo o prácticas se- cia hormonal del ciclo menstrual, pero en al-
xuales. Aunque no es frecuente como causa gunos casos puede ser la primera vez que la
de dolor anal agudo, no es insólito ver esta paciente experimente dolor anal en forma agu-
patología. Se requiere, por lo tanto, un alto da. La anamnesis es fundamental para sos-
índice de sospecha para hacer el diagnóstico. pechar el diagnóstico.

834
CAPÍTULO XXI: DOLOR ANAL AGUDO

En la mayoría de casos la presentación es si- lidad. Se debe examinar el periné y si no exis-


milar a la de un absceso anal, con sensación te contraindicación se debe realizar un tacto
de masa, renitencia y dolor. rectal. Las lesiones del canal anal pueden ha-
cer sospechar lesiones del recto, con compro-
miso del espesor completo de la pared del mis-
TRATAMIENTO mo, por lo cual es necesario descartar perfo-
raciones del recto, heridas asociadas pélvicas
• Examen anal bajo anestesia para estable- e intraabdominales. De acuerdo con los me-
cer el diagnóstico. canismos de la lesión, el esfínter anal puede
• Resección del endometrioma y si compro- estar comprometido.
mete el esfínter reconstrucción del mismo.
Una evaluación bajo anestesia general es fun-
damental y de acuerdo con la lesión y las lesio-
TRAUMA ANAL nes asociadas así como el estado del pacien-
te se hará el tratamiento. En el caso de que la
No es muy frecuente. Puede ser causado por lesión comprometa el recto bajo, se debe de-
trauma cerrado (externo o autoinfringido) o rivar al paciente, lavar el recto distal y drenar
bien por trauma penetrante por proyectil de el espacio presacro. No existe consenso sobre
arma de fuego o por arma cortopunzante. si se debe reparar el esfínter en forma prima-
ria, junto con una colostomía derivativa, o dejar
Todo paciente con trauma debe evaluarse y la reconstrucción para un segundo tiempo qui-
manejarse siguiendo las guías de manejo del rúrgico. El uso de antibióticos de amplio espec-
ATLS. Luego de cumplir con el ABC, se debe tro está indicado en todos los casos. Las frac-
efectuar una revisión primaria y luego una se- turas abiertas de pelvis con contaminación tie-
cundaria, examinando al paciente en su tota- nen una alta morbi-mortalidad.

ABSCESO ANAL DIAGNÓSTICO

DIAGNÓSTICO

DUDA

EXAMEN ANAL RESONANCIA MAGNÉTICA


BAJO ANESTESIA DEL PERINE

835
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PROLAPSO HEMORROIDAL AGUDO


TRATAMIENTO

MÉDICO

SIGNOS ISQUEMIA

(-) (+)

AMBULATORIO
HOSPITALIZAR

PROLAPSO HEMORROIDAL AGUDO


TRATAMIENTO

GANGRENA

HEMORROIDECTOMIA
DE EMERGENCIA

Hansen 1975, Heald


1986

836
CAPÍTULO XXI: DOLOR ANAL AGUDO

TROMBOSIS HEMORROIDAL
TRATAMIENTO

DOLOR

AGUDO SEVERO >48H MODERADO


HEMORROIDECTOMIA >48H

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Antropoli C, Perrotti P, Rubino M, et al. Nifedipine 9. López G. Abscesos ano-rectales. En: Manual de
for local use in conservative treatment of anal Patología Colo-recto-anal. Editado por G Escobar.
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837
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXII

Manejo de sondas enterales

Sonia Echeverri de Pimiento, Enf., CNSN


Enfermera Jefe, Servicio de Soporte Metabólico y Nutricional
Fundación Santa Fe de Bogotá

José Mario Pimiento, MD


Residente de Cirugía Hospital St. Mary’s
Wasterbury, USA

OBJETIVO

E l objetivo de esta guía es revisar el em-


pleo de las sondas nasoenterales, sus in-
dicaciones, los recursos necesarios para su
4. Medio diagnóstico: radiográfico, manometría
y medición del pH gástrico e intraluminal.
5. Compresión esofágica (várices sangrantes).
inserción, la descripción del procedimiento, las
complicaciones y su manejo.
CONTRAINDICACIONES
DEFINICIÓN La intubación del tracto digestivo está contrain-
dicada en un grupo limitado de pacientes con
Las sondas nasoenterales son tubos de clo- predisposición a presentar lesiones relaciona-
ruro de polivinilo, polietileno, poliuretano o de- das con su inserción:
rivados, que, puestos a través de la nariz o de
la boca permiten acceder al tracto gastrointes- 1. Los tubos nasoenterales en pacientes con
tinal, esófago, estómago o intestino, con el fin fractura facial, con lesión de la lámina cri-
de aspirar su contenido, lavar el estómago, bosa pueden permitir la penetración intra-
ejercer compresión, administrar medicamen- craneana del tubo, por lo cual se recomien-
tos y nutrientes y como medio diagnóstico. da el uso de una sonda oroenteral.
2. En pacientes con estrechez esofágica o
con historia de quemadura por sustancias
INDICACIONES alcalinas, en especial si ha sido reciente,
la posibilidad de perforación esofágica es
La intubación nasoenteral u oroenteral, está alta.
indicada en las siguientes situaciones: 3. Las arcadas producidas con el paso del
tubo aumentan el retorno venoso e incre-
1. Aspiración o drenaje. mentan la presión venosa intracraneana y
2. Lavado gástrico. cervical, lo cual puede provocar sangrado
3. Administración de medicamentos o de y aumento de la presión intracraneana o
nutrientes. cervical.

838
CAPÍTULO XXII: MANEJO DE SONDAS ENTERALES

CONSIDERACIONES ESPECIALES una punta cerrada y cuatro orificios laterales


en su extremo distal. Mide 115 cm y tiene cali-
1. Los pacientes comatosos pueden vomitar bres que varían entre 12 Fr y 20 Fr. Se encuen-
durante o después del paso del tubo naso- tran marcas laterales a 37, 54, 67 y 68 cm. Es
gástrico, por lo que se recomienda prote- radioopaca y, por lo tanto, se puede determinar
ger la vía áerea antes del procedimiento. su ubicación mediante radiografías simples.
2. Los tubos nasogástricos no son requeridos
en forma rutinaria en pacientes con pan- Nelaton: sonda de uso habitual en urología.
creatitis. Mide 42 cm, es de una luz y de punta cerrada
3. La irrigación intragástrica exhaustiva con y un orificio lateral distal; tiene calibres de 8
agua puede disminuir severamente los ni- Fr a 20 Fr. Por su escasa longitud se utiliza
veles de potasio y la temperatura corporal. para intubaciones gástricas en recién nacidos.
4. La intubación nasal en el recién nacido no Nelatoncaths®, distribuidor en Colombia:
se recomienda, toda vez que el neonato Sherleg.
respira por la nariz.
Salem: sonda gástrica de dos luces; una, de
pequeño calibre para el paso de aire, marca-
TIPOS DE SONDAS O TUBOS da con azul, que no debe ser usada para irri-
NASO/OROENTERALES gación o succión, y la principal, transparente,
para conectar a los equipos de succión. Per-
Existen diversos tipos de sondas, cuyo dise- mite un sistema de succión continua sin alta
ño y tecnología han avanzado para atender presión (Figura 1). Ventrol Levin (Mallin-
las necesidades y especificaciones de la tera- ckrodt®), distribuida en Colombia por Tyco.
péutica actual. Los tubos, en general, utilizan
dos medidas: una longitudinal, en centímetros Ewald: puede ser de una o dos luces. Es una
(cm) y pulgadas, y otra de calibre, cuya uni- sonda gruesa para uso en adultos, en calibre
dad de medida es el French (Fr), el cual co- 28 Fr a 40 Fr. Se utiliza para lavado gástrico
rresponde a 0,33 mm. en pacientes con intoxicación exógena; se
recomienda proteger previamente la vía aé-
SONDAS DE ASPIRACIÓN, DRENAJE O COM- rea. Disponible en el mercado como Code
PRESIÓN ESOFÁGICA Blue Easi-Lav. Ballard®, distribuidor en Co-
lombia: Minerva Trading.
Sengstaken-Blakemore; sonda de compre-
sión esofágica de tres luces, una para insuflar
el balón gástrico, otra para insuflar el balón
esofágico (compresión) y la última para des-
compresión gástrica. Se utiliza como medida
extrema y en pacientes muy seleccionados en
el control del sangrado por várices esofágicas.

GÁSTRICA

Levin: diseñada por Abraham Levin y descri-


ta en 1921 en New Orleans. Es la más común-
mente utilizada, tiene una sola luz y presenta Figura 1

839
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

INTESTINALES tener mayores consecuencias; sin embargo,


en la literatura se han reportado casos de for-
Miller-Abbott: desarrollada por William Abbott mación de granulomas en el tracto intestinal.
y Thomas Miller en 1934. Utilizada inicialmente
para descompresión postoperatoria. La son- RECURSOS NECESARIOS
da de Miller-Abbott es un tubo delgado de dos
luces con calibres entre 12 Fr y 18 Fr; la 12 Fr 1. Protección del riesgo biológico: guantes,
se utiliza en pediatría y la 16 Fr en adultos. bata y mascarilla con visera.
De tres metros de longitud, se encuentra mar- 2. Sonda o tubo: el tipo y diámetro depende
cada con un anillo a 45 cm, con dos a 60 cm y de la indicación y edad del paciente.
con tres a 75 cm. La luz pequeña permite que 3. Linterna.
se insufle el balón, el cual presenta movimien- 4. “Riñonera” (recipiente para escupir, vomitar).
tos peristálticos, mientras que la luz de mayor 5. Vaso de agua con pitillo.
calibre permite la administración de sustan- 6. Lubricante hidrosoluble.
cias, medicamentos o la conexión a succión 7. Estetoscopio.
(Figura 2). 8. Anestésico local en aerosol o ungüento.
9. Jeringa de 20-50 cc con punta de catéter.
10.Cinta adhesiva (preferiblemente de papel).
11.Gasas.
12.Tintura de benjuí.

PROCEDIMIENTO
El primer paso, al igual que en cualquier pro-
cedimiento, consiste en explicar al paciente y
la familia, en forma clara y precisa, lo que se
le va a realizar y obtener el consentimiento
informado. Posteriormente, confirmar todos
los materiales enumerados en el punto ante-
rior, además de los tubos o sondas adiciona-
les para casos especiales.

Sonda nasogástrica. Medir la distancia de la


Figura 2. Tomado de Echavarría HR sonda que se va a introducir, para lo cual se
utilizan dos técnicas:

Cantor: es una sonda de una sola luz, posee 1. Medir la distancia entre la nariz y el pabe-
en el extremo distal un reservorio con mercu- llón auricular, y desde éste a la apófisis xi-
rio de 54 a 136 g, lo cual la hace más pesada foides, y adicionar 15 cm.
y le permite un mayor deslizamiento a lo largo 2. En niños se prefiere utilizar el método grá-
del tracto intestinal. Tiene las mismas indica- fico (Método de Strobel), en el cual se utili-
ciones que el tubo anterior. Presenta como zan las siguientes fórmulas:
desventaja que el mercurio no puede ser reti- Inserción nasal: longitud esofágica (cm) =
rado de la bolsa en la punta. En ocasiones 6,7 + [0,226 x altura en cm].
ésta puede romperse, liberando el mercurio a Inserción oral: longitud esofágica (cm) =
la luz intestinal, complicación que parece no 5,0 + [0,252 x altura en cm].

840
CAPÍTULO XXII: MANEJO DE SONDAS ENTERALES

Según Klasner, A.J Scalzo modificó la fórmu- tancia de colocación de la sonda, como se
la, usando un factor de corrección, en la cual aprecia en la (Figura 3).
utiliza la talla y sobre una línea localiza la dis-

Inserción del tubo en cm (Altura en cm)

Figura 3. Longitud estimada para la inserción del tubo gástrico. Scalzo et al, mencionado por Klasner et al.

Posteriormente señalar en la sonda, con un recer su paso al esófago. En el paciente


marcador o con cinta adhesiva, la distancia que por su estado de conciencia no pueda
que se va a introducir. colaborar, se pide a un ayudante que flexio-
ne su cabeza, con el fin de cerrar la vía
3. Evaluar las fosas nasales y su permeabili- aérea e impedir que la sonda se dirija ha-
dad. Ocluir una fosa y pedir al paciente que cia la tráquea.
respire; repetir el procedimiento en la otra 7. Introducir el tubo hasta la zona señalada y
fosa nasal. proceder a la confirmación de su ubicación,
4. Lubricar la sonda y la fosa nasal. Previo al la cual puede hacerse de la siguiente forma:
paso de la sonda, aplicar una cantidad pe- • Instilación de aire por la sonda y confir-
queña de anestésico local en la fosa nasal mación por auscultación de la misma.
seleccionada, En pacientes comatosos esta medida
5. Poner al paciente en posición de Fowler o puede no ser suficiente, y en tales ca-
semiFowler. sos se recomienda tomar una radiogra-
6. Iniciar la inserción de la sonda con suavi- fía simple de abdomen o una de tórax
dad; si se encuentra mucha resistencia, con el fin de confirmar que la sonda no
cambiar de fosa nasal o de sonda por una haya quedado ubicada en el pulmón.
más delgada. Cuando se encuentre en la • Aspiración de contenido gástrico. Se
orofaringe, pedir al paciente que inicie la puede adicionar la prueba de pH para
deglución de un trago de agua para favo- determinar, a través del pH del drenaje

841
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

o aspirado, la ubicación del tubo en el do al compromiso del estado de conciencia,


estómago, duodeno o en pulmón. Un pH puede requerirse la administración de medi-
<4 significa una probabilidad de 95% de camentos o de medio de contraste, para lo
estar localizada en el estómago, un pH cual se deja durante unos días la sonda utili-
igual o mayor de 6 puede indicar que la zada para aspiración o drenaje. Sin embargo,
sonda se encuentra localizada en pul- las características del material indican que
món o distal al píloro. Se puede encon- ésta permanezca por no más de 5-8 días. Para
trar contenido alcalino en aproximada- la medición de pH gástrico e intraluminal y
mente 2% de los pacientes debido a múl- otras pruebas diagnósticas se utilizan sondas
tiples causas, como reflujo gastroesofá- especiales.
gico, antiácidos, bloqueadores H 2, infu-
sión de fórmulas nutricionales o medi- A pesar de que la intubación enteral para ali-
camentos intragástricos. mentación no es un procedimiento que se rea-
liza de urgencia y, menos en un departamen-
Fijar la sonda con cinta, preferiblemente de to de urgencias, sí es frecuente la consulta
papel, a la nariz, sobre la mejilla y detrás de la de pacientes en programas de nutrición domi-
oreja. Se puede hacer en forma de mariposa, ciliaria que accidentalmente pierden la vía de
previa limpieza del área con tintura de benjuí. acceso enteral. Debido a que por lo general
Revisar que no queden zonas de presión para el trayecto fistuloso se forma a partir de la se-
evitar laceraciones y úlceras de presión. gunda semana de realizada la gastrostomía,
en el caso de la salida accidental de la sonda
Si el paciente requiere deambular, se reco- por ruptura del balón o movimiento brusco que
mienda desconectar la succión y cerrar el ex- produce la extrusión de una sonda de remo-
tremo proximal de la sonda con el extremo ción externa (gastrostomía endoscópica), se
azul de la vía de aire. recomienda insertar inmediatamente una
sonda (de Levin o tubo de gastrostomía de
La inserción de sondas en pacientes incons- repuesto) y fijarla con cinta adhesiva con el
cientes puede tornarse difícil, por lo cual se fin de evitar la pérdida del tracto fistuloso. En
recomienda la utilización de elementos de los casos en que aún no exista el trayecto fistu-
apoyo como laringoscopio, pinza de Magill, loso (antes de la segunda semana) se reco-
intubación esofágica con un tubo endotraqueal mienda avisar al médico tratante, equipo de
(usado como guía) el cual se retira una vez soporte nutricional y acudir al departamento
se consiga posicionar la sonda gástrica o ente- de urgencias a la mayor brevedad posible, es-
ral. En casos extremos se puede recurrir al pecialmente si muestra signos de sangrado
uso de fibrobroncoscopios flexibles o endosco- por la ostomía.
pios. Otra de las medidas utilizadas en intuba-
ciones complicadas es el enfriamiento de la En pacientes con déficit neurológico y compro-
sonda con el fin de aumentar su rigidez y faci- miso de la deglución, riesgo de aspiración o
litar su manipulación. pacientes con enfermedad neoplásica, a ni-
vel de la orofaringe, laringe o esófago, se pue-
SONDAS NASOENTERALES de considerar la colocación de la sonda a cie-
PARA ADMINISTRACIÓN DE NUTRIENTES gas, por endoscopia o bajo visión fluoroscópi-
ca, especialmente si se considera la reubica-
Una vez resuelta la causa por la cual se reali- ción de un acceso enteral para el suministro
zó la intubación gástrica de urgencia, y debi- de nutrientes (Figura 5). La sonda nasoyeyu-

842
CAPÍTULO XXII: MANEJO DE SONDAS ENTERALES

nal con descompresión gástrica está indica- La necesidad de un acceso enteral a largo pla-
da en aquellos pacientes con compromiso del zo requiere una solución permanente o defi-
vaciamiento gástrico y su principal objetivo es nitiva; por lo tanto, está indicada una gastros-
prevenir la broncoaspiración. También se uti- tomía, yeyunostomía o un acceso gastroye-
liza en pacientes que requieren disminuir la yunal. Este procedimiento debe ser realizado
estimulación pancreática (Figura 6). por personal calificado.

COMPLICACIONES DE LA INTUBACIÓN
GASTROINTESTINAL

Las complicaciones de este procedimiento son


muy variadas, en la Tabla 1 se presentan las
más comunes.

Otras complicaciones, aunque menos frecuen-


tes, merecen ser mencionadas por su severidad:

1. Obstrucción intestinal o necrosis de pared,


Figura 5. Sonda nasoenteral con punta de tungsteno bien sea por exceso de agua o aire en el
balón durante el procedimiento o por absor-
ción de gas intestinal del balón, acodamien-
to o anudamiento de la sonda.
2. Perforación esofágica en pacientes que tie-
nen lesiones a este nivel, especialmente
posterior a la ingesta de cáusticos.
3. Se ha documentado estenosis esofágica
relacionada con sondas a permanencia, al
parecer porque estas favorecen el reflujo y
la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
4. Perforación de úlceras de estrés o de úl-
ceras malignas en el tracto gastrointestinal.
5. Ruptura de anastomosis proximales al re-
tirar la sonda con el balón inflado.
6. Perforación esofágica en pacientes que tie-
nen lesiones a este nivel especialmente
posterior a la ingesta de cáusticos.
7. Se ha documentado estenosis esofágica
relacionada con sondas a permanencia, al
parecer porque favorecen el reflujo y la en-
fermedad por reflujo gastroesofágico.
8. Perforación de úlceras de estrés o de úl-
ceras malignas en el tracto gastrointestinal.
Figura 6. Sonda de alimentación yeyunal y 9. Ruptura de anastomosis proximales al re-
descompresión gástrica. tirar la sonda con el balón inflado.

843
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. COMPLICACIONES DE LAS SONDAS ENTERALES

Complicación Causas Prevención Tratamiento


De la inserción
Sangrado de la vía aérea Trauma directo sobre los tejidos, Evaluación de los orificios na- Retiro de la sonda. Si el san-
superior, laceración esofá- paso de la sonda con la guía sales, verificación de la inte- grado persiste realizar tapo-
gica, perforación gastroin- puesta, coagulopatía, prolonga- gridad de la lámina cribosa y namiento nasal. La presen-
testinal, hemorragia de vías ción de los tiempos de coagula- huesos propios de la nariz, cia de hemorragia de vías
digestiva altas. ción, técnica inadecuada de conocer los antecedentes clí- digestivas altas o perfora-
inserción. Utilización de sondas nico patológicos del paciente, ción de várices esofágicas
Ubicación inadecuada de de aspiración inadecuadas. verificación de los tiempos de puede requerir esclerosis
la sonda: intracraneana o coagulación, utilización de lu- del sitio de sangrado activo,
pulmonar. bricante. Evitar el paso de la lavado gástrico, transfusión
sonda en pacientes anticoa- de sangre o derivados, va-
gulados Tener especial cuida- soconstrictores, entre otros.
do con pacientes con compro-
miso neurológico. Verificar la
posición de la sonda, por in-
suflación de aire y ausculta-
ción, aspiración y medición
del pH del contenido gastroin-
testinal, en caso de duda, soli-
citar una radiografía.
De la permanencia del tubo
Desequilibrio hidroelectro- Aspiración de gran cantidad de Vigilar niveles de electrolitos Reposición de líquidos y
lítico (hipokalemia, hipona- jugo gástrico o intestinal. en sangre, gasimetría y mani- electrolitos.
tremia, alcalosis). festaciones clínicas.
Infección de las estructu- Utilización de sondas de grueso Limitar la intubación simultá-
ras de la vía aérea supe- calibre y material poco biocom- nea a casos estrictamente ne-
rior, oído y garganta (sinu- patible por largos periodos de cesarios. Suspender su utiliza-
sitis, otitis, parotiditis). tiempo. Intubación orotraqueal ción tan pronto el paciente
e intubación intestinal simultá- haya disminuido su drenaje o
Necrosis del ala nasal, fís- neas por tiempo prolongado. terminado su indicación. Utili-
tulas traqueosofágicas, Higiene deficiente de las fosas zar tubos a base de materiales
traqueomalasia. nasales y cavidad oral. biocompatibles. Incrementar
las medidas de asesia/ anti-
Neumonía por aspiración. sepsia, higiene del paciente.
Rotar suavemente la sonda
sobre si misma con el fin de
evitar que se adhiera a las pa-
redes. Fijación anatómica de
la sonda. Estimulación de las Descontinuar su utilización
glándulas salivales con la mas- o, para indicación a largo
ticación de chicle o de hielo. plazo, realizar una ostomía,
Cabecera elevada y medición avanzar la sonda distal al
de residuo gástrico. Establecer píloro y descomprimir el es-
guías para el manejo de estas tómago. Toma de curltivos y
sondas. antibiograma y antibiotico-
terapia.

844
CAPÍTULO XXII: MANEJO DE SONDAS ENTERALES

Complicación Causas Prevención Tratamiento


De la permanencia del tubo
Retiro involuntario del tubo Pacientes agitados, inmoviliza- Evaluar el estado de concien- Reposición de la sonda, en
Salida o retiro involuntario ción y fijación deficientes.Rup- cia del paciente, fijación ade- casos de recurrencia, esta-
del tubo de gastrostomía. tura del balón. cuada de la sonda y maniobras ría indicada una ostomía. En
de inmovilización del paciente, presencia del tracto fistulo-
revisar periódicamente las con- so, reintroducir la sonda pa-
condiciones del balón del tubo ra evitar perder el tracto fis-
de gastrostomía. tuloso. Se recomienda man-
tener una sonda de Levin
No. 14-18 o un tubo de gas-
trostomía de repuesto con el
fin de mantener permeable
el trayecto fistuloso. Fijar ex-
ternamente con esparadra-
po. Consultar lo más pronto
posible al departamento de
urgencias.

MANEJO
En el uso de las sondas enterales se requiere 4. Marcar con tinta indeleble o con cinta
prestar atención a puntos sencillos, pero in- adhesiva el punto de salida de la sonda con
dispensables en su buen manejo: el fin de evaluar su ubicación y detectar un
posible desplazamiento.
1. Verificar que la explicación del procedimien- 5. Fijar la sonda con cinta de papel a la piel,
to y las instrucciones hayan sido compren- para evitar desplazamientos involuntarios
didas por el paciente y la familia. de la misma. Este paso debe ser repetido
2. Al finalizar cada procedimiento se debe cuantas veces sea necesario en el trans-
realizar autoevaluación por parte de la per- curso de la utilización de la sonda.
sona que lo realizó, para garantizar una 6. Asegurar una succión adecuada, la cual
mejoría en la calidad. depende del tipo de sonda y de la indica-
3. Previo a la fijación, revisar la fosa nasal ción del procedimiento; generalmente una
para evitar zonas de presión o sitios de san- presión negativa de 70-150 cm de agua.
grado y asegurar que el paciente esté res- Vigilar evidencia de sangrado, tanto en la
pirando adecuadamente y se encuentre có- sonda como en el drenaje.
modo.

845
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

7. Si se sospecha oclusión de la sonda, insti- 2. Eisen GM, Baron TH, Dominitz JA, et al. Role of
lar agua con una jeringa de 20-50 ml. Rea- endoscopy in enteral feeding. Gastrointest Endosc
2002; 55:794-797.
lizar un movimiento suave y rotatorio pue-
3. Klasner AE, Luke DA, Scalzo AJ. Pediatric
de ser suficiente en caso de adherencia a orogastric and nasogastric tubes: a new formula
la pared o acodamiento de la sonda. Este evaluated. Ann Emer Med 2002; 39:268-272.
procedimiento debe ser realizado con las 4. Patiño JF. Tratamiento de la hemorragia por vári-
protecciones biológicas necesarias. ces esofágicas. En: Lecciones de Cirugía. Por JF
8. Realizar medidas de higiene en la vía res- Patiño. Editorial Médica Panamericana. Bogotá-
Buenos Aires, 2001.
piratoria superior puede disminuir las com- 5. Patiño JF, Echeverri de Pimiento S et al. Guía y
plicaciones otorrinolaringológicas. normas para alimentación enteral. Trib Médica
9. Registrar en la historia clínica el procedi- 1991; 83:36-43.
miento, las complicaciones y el manejo ru- 6. Samuels LE. Nasogastric tube placement. En:
tinario. Roberts: Clinical procedures in Emergency Medi-
cine. Editado por P Robert. WB Saunders Com-
pany. Philadelphia, 1998.
7. Shackelford RT, Zudeima GD. Intubation. En:
LECTURAS RECOMENDADAS Surgery of the Alimentary Tract. Editado por R
Shackelford, G Zuidema. 2nd edicion. WB Saun-
1. Echavarría HR. Guía de Manejo de Urgencias: ders Company. Philadelphia,1981.
sondas nasointestinales. Ministerio de Salud- 8. Vanek VW. Ins and outs of enteral access: Part 2.
FEPAFEM. Bogotá, 1996. Long term access esophagostomy and gastros-
tomy. Nutr Clin Pract 2003; 18:50-74.

846
CAPÍTULO I: ESCROTO AGUDO

CAPÍTULO I

Escroto agudo

Felipe Gómez, MD
Jefe, Sección de Urología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN FISIOPATOLOGÍA

E s la aparición súbita de un proceso infla-


matorio caracterizado por dolor de inten-
sidad variable, rubor y edema a nivel del es-
Hay dos tipos de torsión del cordón espermá-
tico: extravaginal e intravaginal.

croto. El cuadro suele comprometer sólo una La primera ocurre sobre todo en neonatos y
de las dos mitades de mismo. hasta los 15 meses, como resultado de un giro
de la túnica vaginal antes de que el testículo
Entre las diferentes causas de escroto agudo complete su descenso y se una a la pared es-
(EA), los tres diagnósticos a tener presentes, crotal, lo que permite que el testículo y el gu-
en orden de importancia son: bernaculum giren libremente dentro del
escroto.
1. Torsión testicular.
2. Torsión de apéndice testicular. La torsión intravaginal, la más frecuente, ocu-
3. Epididimitis. rre generalmente en jóvenes como resultado
de la inadecuada fijación de la túnica vaginal
al cordón espermático, permitiendo que el tes-
EPIDEMIOLOGÍA tículo gire libremente dentro de la bolsa
escrotal.
La torsión testicular ocurre en 1 de cada 4.000
hombres antes de los 25 años. Representa Al girar el testículo sobre su pedículo se pro-
25-35% de todas las causas de EA en niños. duce oclusión venosa que, con el transcurso
Según una revisión de 13 estudios con un to- de las horas, lleva a edema y subsiguiente
tal de 1.327 pacientes, la torsión representa oclusión arterial, lo que conduce a necrosis
27% de las causas de EA no traumático. La de la gónada. El proceso por lo general está
incidencia de la torsión de apéndices es de instaurado a las seis horas del evento; en la
32%, siendo la etiología mas frecuente. medida que trascurre el tiempo las oportuni-
dades de que sea reversible son menores y
La incidencia de epididimitis en niños que con- en general, a más de 24 horas de ocurrido el
sultan por escroto agudo es de 7- 35% y varía accidente, la gónada está necrótica y perdida.
según el grupo de edad.

849
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Cuatro apéndices del testículo y del epidídimo nacidos o en la fase temprana de la pubertad.
tienen posibilidad de torcerse con la siguiente Distinto ocurre con la torsión del apéndice tes-
frecuencia: ticular o del apéndice del epidídimo, que son
más comunes en pacientes prepuberales. La
1. Apéndice testicular 92%. epididimitis es mas frecuente en los adoles-
2. Apéndice de la cabeza del epidídimo 7%. centes, de ahí la importancia de la historia
3. Órgano de Giraldés 0,7%. sexual en estos pacientes.
4. Vas aberrans 0,3%.
CARACTERÍSTICAS DEL DOLOR
La etiología de la epididimitis puede ser bacte-
riana, viral, tuberculosa, vascular, traumática Debe indagarse si es de inicio súbito o gradual,
e inespecífica (también llamada estéril), que si el curso es intermitente o constante; si la
responde a la mayoría de los casos. La ma- localización es abdominal, inguinal o escrotal,
yoría de los pacientes con esta patología son si es generalizado o localizado; la intensidad
adolescentes o adultos menores de 35 años. y la duración.
Las principales causas son las enfermedades
de transmisión sexual (Chlamydia trachomatis, EXAMEN FÍSICO
Neisseria gonorrhoeae).
En la evaluación inicial del niño se deben te-
En pacientes mayores de 35 años los micro- ner en cuenta los parámetros básicos como
organismos más frecuentemente implicados son la inspección, palpación y en caso de
son aquellos que causan infección de la vía requerirlo la transiluminación.
urinaria como E. coli, Proteus spp, Klebsiella
pneumoniae entre otros. Es muy importante observar al niño y valorar
la severidad del dolor, si está acostado en la
En niños esta patología es infrecuente y se de- camilla, si está jugando o si puede ser
be pensar en anomalías del tracto genitourina- distraído.
rio, tales como obstrucción uretral, uréter ectó-
pico o alteraciones en el vaciamiento vesical, Se debe determinar la presencia o ausencia
que facilitan el reflujo de orina a través de los de reflejo cremasteriano en todos los niños
conductos eyaculadores hacia los epidídimos. con EA, el cual se obtiene pinzando la piel de
la parte superior del muslo del testículo ipsila-
teral, lo que promueve la estimulación del mús-
CUADRO CLÍNICO culo cremastérico que produce el ascenso del
testículo. Idealmente debe ser realizado pri-
La anamnesis de un paciente con EA sugiere mero en el lado sano. La ausencia de este
la etiología. Los tres detalles más importan- reflejo orienta hacia una torsión testicular.
tes que hay que tener en cuenta en la historia
clínica son los siguientes: Observar el abdomen inferior, pene y escroto,
detallando el grado de edema, la presencia y
EDAD localización del eritema, la disposición de los
testículos, el engrosamiento de la piel escrotal
A pesar de que la torsión testicular puede ocu- y si se aprecia alguna colección en su interior.
rrir a cualquier edad, tiene una distribución Se debe explorar el canal inguinal en busca
bimodal, siendo más frecuente en los recién de hernia o edema.

850
CAPÍTULO I: ESCROTO AGUDO

En las fases iniciales de una torsión aumentan El reflejo cremasteriano esta intacto a pesar
el tamaño y la consistencia del testículo, sien- de la isquemia de los apéndices.
do muy doloroso. En las primeras horas el ede-
ma puede no estar presente, pero el testículo La epididimitis es una inflamación o infección
está aumentado al compararlo con el contrala- del epidídimo que rara vez es vista en el niño
teral, en contraste con las fases iniciales de prepúber. Generalmente el dolor es de co-
una epididimitis o una torsión apendicular en mienzo insidioso y puede estar precedido de
la cual los dos testículos son de similar tama- frecuencia urinaria, disuria y fiebre.
ño. El proceso suele ser progresivo en intensi-
dad, tanto en lo referente al dolor como a la Los hallazgos al examen físico son edema y
magnitud del edema. eritema escrotal, además de epidídimo doloro-
so, que se puede extender al testículo o al
Si el dolor tiene 12 horas de evolución y el canal inguinal en el transcurso de unas horas.
escroto se ve relativamente sano es poco pro- Los pacientes a menudo experimentan alivio
bable que se trate de torsión testicular. del dolor al elevar el testículo.

La palpación en presencia de torsión se ca- Cuando se sospecha epididimitis se debe in-


racteriza por la dificultad en precisar las dife- tentar exprimir la uretra en busca de secrecio-
rentes estructuras de la bolsa escrotal, tanto nes que se puedan estudiar en el laboratorio.
por el dolor como por la turgencia y el edema. Los síntomas irritativos del tracto urinario co-
Además, se suele encontrar testículo ascen- mo disuria y polaquiuria son usuales. En el
dido con disposición transversal y epidídimo sedimento urinario del examen parcial de ori-
en posición anormal con hipersensibilidad de na suele evidenciarse piuria y bacteriuria, lo
la totalidad del testículo. que orienta hacia el diagnóstico de un proce-
so infeccioso.
La torsión del apéndice testicular puede ocu-
rrir a cualquier edad pero es más común en La orquitis es una infección o inflamación del
niños entre los 7-12 años. El dolor es similar testículo, usualmente como resultado de ex-
al de la torsión testicular pero menos severo, tensión directa del mismo proceso que envuel-
con inicio más gradual, llegándose a desarro- ve al epidídimo. La orquiepididimitis se pre-
llar en pocos días. senta aproximadamente en 20% de los casos.

La mayoría de los pacientes consultan a las La infección que compromete únicamente al


12 horas y rara vez el dolor está acompañado testículo es rara, pero puede ser secundaria
de otros síntomas, como náuseas o vómito. a diseminación hematógena de una infección
bacteriana en cualquier parte del cuerpo o
Al evaluar el paciente en las primeras horas, como complicación de una parotiditis.
generalmente el testículo es de tamaño normal
o con discreto eritema en el hemiescroto, ade-
más de una sensibilidad muy localizada en el AYUDAS DIAGNÓSTICAS
polo superior; incluso se puede palpar un nódu-
lo duro que, a la inspección, puede tornarse de EXAMEN DE ORINA
color azulado, visible a simple vista o también
por transiluminación; esto es lo que se conoce El examen citoquímico de orina debe ser soli-
como el signo del punto azul (“blue dot sign”). citado en los pacientes con sospecha de es-

851
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

croto agudo. Es útil para descartar infección TRATAMIENTO


urinaria. Sin embargo en un estudio, sólo 5
de 115 niños y adolescentes con torsión testi- El tratamiento de la torsión testicular debe ser
cular tenían un citoquímico anormal, lo cual quirúrgico e inmediato para preservar el testí-
sugiere que la gran mayoría de los pacientes culo, lo cual usualmente es posible cuando
con esta patología tienen un uroanálisis lleva menos de 12 horas de instaurado el
normal. cuadro.

En la epididimitis el citoquímico muestra piuria Los objetivos de la intervención quirúrgica son


y en ocasiones bacterias. Siempre debe solici- dos:
tarse urocultivo y si hay secreción uretral, frotis
directo, Gram y cultivo. • Destorcer el testículo afectado.
• Fijar el testículo contralateral (orquidopexia)
para prevenir futura torsión.
IMÁGENES DIAGNÓSTICAS
Si se detecta en forma temprana, el manejo
Siempre que se confirme una epididimitis en es el mismo que el de la torsión intravaginal,
un niño se debe practicar un estudio imageno- pero continúa siendo muy controvertido si se
lógico de la vía urinaria por la sospecha de debe fijar o no el testículo contralateral debido
malformaciones congénitas que puedan pro- a que el riesgo de torsión posterior es bajo;
ducir esta infección. pero, dada la morbilidad en esta patología, es
razonable realizar la orquidopexia.
Si se cuenta de manera inmediata con ayudas
diagnósticas tales como la eco-Doppler escro- En la torsión neonatal el testículo se salva en
tal o la gamagrafía de perfusión testicular, se muy pocas ocasiones (5%), porque la mayo-
puede recurrir a éstas como confirmación diag- ría de las veces el proceso ha sido prenatal.
nóstica, pero de ninguna manera se debe con-
dicionar el diagnóstico a dichas ayudas. La Sólo en el caso en que se retarde la explora-
mayoría de los resultados comparativos son ción quirúrgica, la destorsión manual transcu-
muy similares para el diagnóstico de torsión tánea esta indicada, ya que disminuye la is-
testicular: la eco-Doppler tiene sensibilidad de quemia antes de que el paciente sea llevado
82-100% y la gamagrafía de 84-100%. a cirugía. Usualmente la torsión ocurre en sen-
tido medial, por lo que la destorsión se debe
Usualmente los apéndices normales no se vi- realizar en sentido horario en el testículo iz-
sualizan con estas técnicas. Cuando hay tor- quierdo y antihorario en el derecho; para que
sión apendicular la gamagrafía o la eco-Do- sea mas fácil de entender, la destorsión se
ppler pueden ser normales o pueden tener un hace “en libro abierto”. Esta maniobra debe
flujo sanguíneo incrementado, lo que se cono- ser realizada bajo analgesia o idealmente in-
ce como el “signo del punto rojo” en el testículo filtrando el cordón espermático con anestesia
o el epidídimo afectado. La característica más local.
típica en la eco-Doppler es la hiperemia, con
sensibilidad de 100%; en ocasiones puede ob- En los pacientes con torsión intermitente la
servarse hidrocele secundario al proceso in- conducta más apropiada es programar elec-
flamatorio. tivamente cirugía para fijación testicular bila-
teral.

852
CAPÍTULO I: ESCROTO AGUDO

Cuando hay alta sospecha de torsión apendi- positivos, el paciente debe ser estudiado con
cular, el manejo se hace con reposo, eleva- urografía excretora, cistouretrografía retrógra-
ción del testículo y administración de antinfla- da y miccional, ecografía y cistoscopia para
matorios. El cuadro se resuelve en la primera descartar alguna anomalía estructural como
semana, pero se requiere de gran experien- uréter ectópico, estrechez uretral y obstruc-
cia para tomar esta determinación. Si hubie- ción de los conductos eyaculatorios.
se dudas, la conducta más apropiada es pro-
ceder a la exploración escrotal y remoción de
la hidátide necrótica. Si ésta se confirma, no PRONÓSTICO
se requiere de exploración contralateral.
La torsión testicular puede llegar a afectar
Cuando los estudios de imagen demuestran severamente la función endocrina y exocrina
ausencia de flujo arterial, la exploración escro- del testículo comprometido. A nivel celular se
tal esta indicada; en presencia de aumento ha encontrado que las células de Sertoli, que
del flujo se puede institur un tratamiento anti- están implicadas en la maduración de las es-
inflamatorio, pero se debe tener presente que permátides, son más susceptibles al proceso
en pacientes con torsión intermitente se pue- isquémico que las células de Leydig, respon-
de presentar aumento de flujo arterial en el sables de la secreción de testosterona. Ade-
momento de la reperfusión testicular. más, se ha demostrado que 24 horas después
de la torsión, la actividad espermatogénica se
El tratamiento de la epididimitis en pacientes disminuye en el testículo contralateral, aun-
con vida sexual activa se basa en antibiótico- que esa disminución es reversible.
terapia empírica, mientras se espera el resul-
tado del urocultivo. Los antibióticos mas indi-
cados son la ceftriaxona 250 mg en dosis úni- PUNTOS A RECORDAR
ca IM, más doxiciclina 100 mg por vía oral
cada 12 horas por 10 días. También se reco- 1. Todo escroto agudo es una torsión testicu-
mienda reposo, elevación del testículo y lar mientras no se demuestre lo contrario.
antinflamatorios. 2. El diagnostico es clínico y las ayudas diag-
nósticas son sólo herramientas adicionales,
En pacientes alérgicos a la penicilina, se cam- por lo que no se debe condicionar a ellas el
bia la ceftriaxona por una dosis de 500 mg de diagnóstico y menos aún la conducta.
ciprofloxacina. 3. Ante la sospecha de torsión testicular la
conducta debe ser la exploración inmediata
En pacientes mayores de 35 años el tratamien- por vía escrotal y fijación del testículo
to de elección es la ciprofloxacina oral 500 mg contralateral.
cada 12 horas por 10 días. 4. La eco-Doppler y la gamagrafía de perfu-
sión son útiles para descartar o confirmar
En niños sin anomalías del tracto urinario, con el compromiso isquémico de la gónada, pe-
citoquímico de orina normal no está justifica- ro si se retarda el diagnóstico o el resulta-
do el uso de antibióticos. do no es concluyente, se debe llevar a
cirugía.
Sin embargo, independientemente de la edad 5. La conducta más acertada es la que todo
del paciente, si hay epididimitis e infección del niño mayor de 11 años con escroto agudo
tracto urinario recurrentes, o cultivos de orina de menos de 12 horas de evolución, debe

853
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ser explorado quirúrgicamente, sin esperar LECTURAS RECOMENDADAS


a realizar ayudas diagnósticas que pudie-
sen comprometer la viabilidad del testículo. 1. Kass EJ, Lundak B. The acute scrotum. Pediatr
6. El antecedente de fijación testicular no des- Clin North Am 1997; 44:1251-66.
carta la posibilidad de una nueva torsión 2. Hawtrey CE. Assessment of acute scrotal
symptoms and findings. A clinician’s dilemma. Urol
de la gónada.
Clin North Am 1998; 25:715-23.
7. El paciente y la familia deben ser informa- 3. Marcozzi D, Suner S. The nontraumatic acute
dos de la eventualidad de tener que practi- scrotum. Emerg Med Clin North Am 2001; 19:547-
car orquidectomía. Se debe incluir en el 68.
consentimiento informado y por escrito esta 4. Sessions AE, Rabinowitz R, Hulbert WC, et al.
eventualidad. Testicular torsion: direction, degree, duration and
8. El cuadro clínico de la torsión de hidátide disinformation. J Urol 2003; 169:663-5.
es muy similar al de la torsión testicular y 5. Horstman WG. Scrotal imaging. Urol Clin North
Am 1997; 24:653-71.
por lo tanto se deberá explorar, sobre todo
6. Siegel MJ. The acute scrotum. Radiol Clin North
si existen dudas en el diagnóstico. Am 1997; 35:959-76.
9. La epididimitis es una entidad infrecuente
en la población pediátrica.

854
CAPÍTULO II: CÓLICO RENOURETERAL

CAPÍTULO II

Cólico renoureteral

Adolfo Serrano-Acevedo, MD
Sección de Urología
Fundación Santa Fe de Bogotá

GENERALIDADES

E xisten diversas enfermedades que se ma-


nifiestan con la formación de cálculos o
piedras urinarias. Tomadas en conjunto, su
en cualquiera de sus segmentos. La obstruc-
ción conduce a la dilatación de todas las par-
tes del árbol urinario proximales al sitio de im-
prevalencia es de 5% en la población gene- pactación de la piedra. La tensión sobre la cáp-
ral. La edad más frecuente de presentación sula y la pelvis renales son los estímulos perci-
fluctúa entre los 30 y 50 años; tienen el doble bidos como dolorosos. La inervación esplácni-
de frecuencia en hombres y la presentación ca compartida hace que sean frecuentes ma-
clínica más frecuente, tanto en casos nuevos nifestaciones intestinales tales como disten-
como en los conocidos, es el cólico renourete- sión, íleo, náusea y vómito. Así mismo, dado
ral. El evento, de gran dramatismo por el in- el severo dolor, se presenta una intensa des-
tenso dolor que lo caracteriza, representa al- carga simpática que se manifiesta por taqui-
rededor del 4% de las consultas de urgencias. cardia, taquipnea, hipertensión y ansiedad.

ETIOPATOGENÍA PRESENTACIÓN CLÍNICA


El origen de las piedras renales es diverso y El cólico renoureteral es un cuadro de presen-
comprende desórdenes del metabolismo del tación típica, su reconocimiento es en gene-
ácido úrico, del ácido oxálico, del calcio, de ral fácil y ello hace que el diagnóstico sea prin-
los citratos y de los fosfatos, así como ano- cipalmente clínico. Sólo ocasionalmente se re-
malías estructurales e infección urinaria. No quiere de ayudas paraclínicas para el diag-
es el objeto de esta guía su revisión; en cam- nóstico.
bio, sí se debe enfatizar que el estudio de la
enfermedad litiásica de fondo no se debe em- Característicamente los pacientes describen
prender en el ámbito de urgencias, escenario ‘–habiendo estado previamente sanos– un
en el cual todas las variables metabólicas de dolor de progresión rápida, que se hace muy
estos enfermos pueden estar alteradas. intenso. Lo localizan en el ángulo costover-
tebral (sugerimos preferir este término para
Este complejo sintomático se presenta en el describir la localización, ya que el término
momento en que un cálculo obstruye un infun- “lumbar” es tan amplio que pierde mucho de
díbulo calicial, la unión pieloureteral o el uréter su carácter descriptivo), en el flanco o menos

855
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

frecuentemente en un cuadrante inferior o en DIAGNÓSTICO


la región inguinogenital. Es unilateral y se irra-
dia en sentido cefálico o caudal hacia los sitios Aunque se ha enfatizado el carácter típico del
mencionados. A diferencia de pacientes con cólico renoureteral, todas las entidades que
procesos inflamatorios intraperitoneales, que se manifiestan con dolor abdominal pueden
usualmente permanecen quietos, estos enfer- ser objeto de diagnóstico diferencial. En tal
mos se mueven constantemente, tratando de situación, se requieren múltiples evaluaciones
encontrar una posición que les alivie el dolor. paraclínicas para confirmar o descartar su
diagnóstico.
Algunos pacientes tienen un desplazamiento
mas bien silencioso de la piedra, hasta que la
misma se aloja en el uréter terminal y produce LABORATORIO CLÍNICO
síntomas irritativos de la vejiga (frecuencia,
urgencia, tenesmo, sensación de evacuación En el caso típico, las pruebas necesarias son
incompleta) que conducen a diagnósticos de pocas. Un uroanálisis con hematuria apoya
infección o retención urinaria. fuertemente el diagnóstico. Aun así, su ausen-
cia no lo descarta. Hay piedras tan fuertemen-
Es frecuente la asociación con síntomas intes- te impactadas que impiden el drenaje por la
tinales como sensación de distensión abdomi- unidad renoureteral afectada, situación que se
nal, nausea y vómito, que pueden confundir al presenta en aproximadamente 10% de los ca-
examinador. Los enfermos describen usual- sos. El uroanálisis también identifica hallazgos
mente síntomas de deshidratación, producto de sugestivos de infección: leucocituria, nitritos,
la baja ingestión de líquidos, el íleo y el vómito. bacterias. Estos son de importancia dado que
la combinación de obstrucción urinaria e infec-
En el examen físico se observa un paciente ción produce cuadros de gran deterioro del
álgico, ansioso, deshidratado, taquicárdico, paciente.
taquipneico e hipertenso. Con frecuencia el
paciente se torna intolerante e incluso agresi- La creatinina sérica es fundamental. Estos pa-
vo por el dolor, situación que no debe motivar cientes están deshidratados y su consulta se
una respuesta similar por parte del examina- ha motivado por la obstrucción de una unidad
dor. Es muy conocida la sensibilidad a la per- renoureteral. La función renal previa puede es-
cusión del ángulo costovertebral; sin embar- tar afectada por efecto de enfermedad litiásica
go, su exploración con frecuencia no se prac- anterior o de sus tratamientos o por diversas
tica en forma adecuada; más que puño-per- enfermedades como diabetes, hipertensión
cusión se debe hacer digito-percusión, la cual arterial o insuficiencia renal crónica. La hipera-
debe ser comparativa con el lado opuesto y zohemia motiva la hospitalización del pacien-
con áreas más altas o bajas del dorso. La hipe- te. Por otra parte impide la realización de es-
restesia a la percusión es muy evidente. La tudios radiológicos con medios de contraste.
palpación abdominal evidencia un abdomen
blando pero es frecuente el dolor a la palpa- El hemograma no es una prueba indispensa-
ción profunda, sea en el hipocondrio o en el ble en el estudio del cólico renoureteral. Sin
flanco. Nunca se debe olvidar el examen ge- embargo, dado el ámbito de urgencias en el
nital: el escroto agudo puede producir dolor cual sucede el episodio, sería riesgoso no ha-
inguinoescrotal que puede malinterpretarse cer tal evaluación en todos los pacientes que
como un cuadro de litiasis. acuden por dolor abdominal. Son frecuentes

856
CAPÍTULO II: CÓLICO RENOURETERAL

la leucocitosis, la neutrofilia y la desviación a que es fundamental para elegir el manejo de-


la izquierda, sin que necesariamente indiquen finitivo. Por lo demás, es un estudio altamen-
infección urinaria. te dependiente del operador y del equipo. En
general no es suficiente para que el urólogo
proponga un manejo definitivo y se debe com-
IMAGENOLOGÍA plementar con otras modalidades imageno-
lógicas.
La utilización de imágenes diagnósticas en ur-
gencias para la evaluación del cólico renoure- En algunos ámbitos se practican estudios
teral está profundamente arraigada en la men- con radiofármacos con el ánimo de estable-
te de médicos y pacientes. Aun así, su utiliza- cer el grado de obstrucción presente. Esta mo-
ción en los casos típicos que, como se ha in- dalidad no da información alguna sobre las
sistido, son la mayoría, es cuestionable. En el características de la piedra ni de la anatomía
caso típico, las imágenes usualmente no agre- renoureteral y tiene importantes limitaciones
gan información pertinente en ese momento de disponibilidad del recurso. Así mismo, la
ni van a modificar el manejo. Por otra parte, obstrucción aguda por litiasis, a menos que
son estudios que se practican en las circuns- se trate de un monorreno (riñón único) o de
tancias menos óptimas por la ausencia de pre- alguien con severa disminución de su función
paración intestinal y la presencia de deshidra- global, no debe ser argumento para ofrecer
tación, y finalmente van a requerir de otras manejos inmediatos. Cabe recordar que la
modalidades complementarias para estable- obstrucción renal aguda, aún prolongándose
cer el manejo definitivo de la litiasis. La reco- por cuatro semanas, no tiene repercusión fun-
mendación es no practicarlos a menos que el cional definitiva.
diagnóstico sea dudoso.
La tomografía axial computadorizada heli-
El método imagenológico más utilizado es la coidal con cortes cada 5 mm (“Urotac”) es un
radiografía simple de abdomen. Con ella se medio de reciente uso para el diagnóstico de
buscan densidades de calcio que sugieran li- litiasis en los servicios de urgencias. Los pro-
tiasis. Puede dar información adicional sobre tocolos diseñados para esa situación particu-
la presencia de íleo, líquido y gases libres en lar son de muy rápida realización, no expo-
la cavidad peritoneal. En la práctica es un estu- nen al paciente a los medios de contraste oral
dio de baja sensibilidad para la detección de o endovenoso y ofrecen la ventaja adicional
litiasis, de aproximadamente 59%. La sensi- de evaluar otras vísceras. Cuando el cuadro
bilidad disminuye en urgencias por la presen- clínico es dudoso, es la imagen más sensible
cia de abundante gas, líquido y materia fecal para diagnosticar al paciente en urgencias.
en el intestino.
La urografía excretora continúa siendo el
La ultrasonografía de las vías urinarias pue- mejor medio de evaluación para la enferme-
de dar información indirecta como dilatación dad litiásica. El estudio provee información fun-
y presencia de líquido perirenal. Es un estu- cional, ofrece información precisa sobre el ta-
dio no invasor, que permite además la evalua- maño, forma, localización, posible composición
ción de otras vísceras. Pero su sensibilidad química y grado de obstrucción. Así mismo, da
también es baja -por el íleo- y sólo detecta información anatómica indispensable para pla-
cálculos proximales o distales. Su definición near los abordajes, haciendo que se constitu-
del tamaño de los cálculos es pobre, aspecto ya en el “mapa de carretera” del urólogo.

857
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La urografía excretora, si bien es el mejor exa- explicación de que recientemente se le admi-


men para la evaluación de litiasis, tiene limita- nistró alguno.
ciones en el ámbito de urgencias por la coexis-
tencia de hiperazohemia, deshidratación e in- Se recomienda el uso de anticolinérgicos. El
adecuada preparación intestinal. Se debe di- más utilizado en nuestro medio es el bromuro
ferir hasta que se puedan controlar la deshi- de hioscina 20 mg, asociado con dipirona 2,5
dratación y la hiperazohemia y obtener una g (Buscapina Compositum ®). Se administra
preparación intestinal adecuada. Todo esto se vía IV en infusión durante 5 minutos, hasta
logra programando el estudio para practicarlo tres dosis en 24 horas.
por consulta externa.
Si no se obtiene pronta respuesta, se recomien-
La utilización de imágenes diagnósticas se da la utilización de opiáceos. De estos, la me-
puede resumir en los siguientes puntos: peridina es el de elección (Demerol ®), vía IV
0,5 mg/kg en infusión en 5 minutos, con posi-
• No recurrir a ningún estudio en urgencias bilidad de repetición a los 20 minutos. Pueden
en los casos típicos. administrarse hasta cuatro dosis en 24 horas.
• Al egreso del paciente, habiendo compro-
bado que la creatinina sérica es normal y No se recomienda el uso de antinflamatorios
que no existen otras contraindicaciones, se no esteroideos (AINES) por la deshidratación
dará orden de urografía excretora para que e hiperazohemia que acompañan al cólico re-
sea practicada por consulta externa. noureteral. Así mismo, no es usual que no pue-
• En los casos de diagnóstico dudoso, don- da controlarse el dolor con los esquemas men-
de existe la tecnología y el personal prepa- cionados.
rado, se recomienda la “Urotac”. Si este no
es el caso, se recurrirá a las otras modalida- Se deben atender la náusea y el vómito, que
des según los recursos tecnológicos y cien- con frecuencia son severos. Se recomienda
tíficos de la institución. la metoclopramida (Plasil®), en dosis de 10
mg IV para repetir cada 8 horas.

TRATAMIENTO No es recomendable administrar antibióticos


como parte del tratamiento. Cuando hay sig-
HIDRATACIÓN Y MEDICACIÓN nos de infección urinaria o cuando se trate de
pacientes con alto riesgo de infeccion (deri-
Los aspectos fundamentales del tratamiento vaciones temporales o definitivas, obstrucción
inicial son la hidratación y la analgesia. Al in- anatómica) sí está indicada la antibioticoterpia,
greso, se debe practicar un acceso venoso pero dentro de un ámbito hospitalario.
para la toma inmediata de muestras de san-
gre y para iniciar una rápida hidratación. La
evaluación por parte del personal debe ser INDICACIONES DE HOSPITALIZACIÓN
pronta y el reconocimiento del cuadro usual-
mente sólo demora unos minutos. Una vez Las indicaciones son:
postulado el diagnóstico, se deben administrar • Dolor de difícil manejo.
analgésicos en forma liberal. Es inadmisible • Hiperazohemia.
el diferir su uso por falta de experiencia en el • Sospecha de infección urinaria.
reconocimiento del caso o por la socorrida • Monorreno conocido.

858
CAPÍTULO II: CÓLICO RENOURETERAL

Los objetivos son el control del dolor, la hidra- dosis en 24 horas, o bromuro de hioscina 10
tación, antibioticoterapia si hay sospecha de mg- acetaminofén 500 mg (Buscapina® Com-
infección urinaria y derivación en caso de in- positum), 1-2 comprimidos hasta tres dosis en
fecciones severas que cursan con obstrucción 24 horas, asociados a tramadol (Tramal ®
y en monorrenos conocidos de antemano. Gotas) 20 gotas (50 mg) vía sublingual hasta
seis dosis en 24 horas como rescate.
Se aprovecha la hospitalización para la eva-
luación imagenológica definitiva, usualmente
mediante urografía excretora. Con esta se ADVERTENCIAS AL EGRESO
identifican los casos con poca posibilidad de
expulsión espontánea de la piedra, es decir, Se debe advertir sobre la posibilidad de repe-
litiasis con diámetro superior a 5 mm. tición del cólico. Es frecuente que, debido a
pobre analgesia y peor información reingrese
Una vez se ha cumplido con los objetivos de un paciente confundido e irritado en medio de
la hospitalización se puede dar de alta el pa- un nuevo evento de dolor. Se debe advertir
ciente. Sólo se daría manejo definitivo en la sobre los riesgos que acarrearía un acceso
misma hospitalización a aquellos con cálculos de dolor por ejemplo a un deportista o a al-
de diámetro superior a 5 mm. El 80% de los guien que debe realizar un viaje. Así mismo,
cálculos con diámetros menores son expulsa- se deben mencionar los riesgos que acompa-
dos espontáneamente, por lo cual el llevar ñan el uso de narcóticos y por último los ries-
tempranamente a todos los pacientes a cual- gos de ignorar su condición y no acudir a la
quier manejo intervencionista implica sobretra- consulta urológica.
tar a una proporción importante de los
enfermos.
LECTURAS RECOMENDADAS

ÓRDENES AL EGRESO DE URGENCIAS 1. Boridy IC, Nikolaidis P, Kawashima A, et al.


Ureterolithiasis: value of the tail sign in differen-
tiating phleboliths from ureteral calculi at nonen-
Se debe aumentar moderadamente la inges-
hanced helical CT. Radiology 1999; 211:619-621.
tión de líquidos. El consumo excesivo de líqui- 2. Catalano O, Nunziata A, Altei F, et al. Suspected
dos, que es usualmente la instrucción dada, ureteral colic: primary helical CT versus selective
acarrea más cólico. Se debe filtrar la orina. helical CT after unenhanced radiography and
La obtención del cálculo, a más de resolver el sonography. AJR Am J Roentgenol 2002; 178:379-
caso, es importante dentro de la evaluación 387.
3. Jones JB, Giles BK, Brizendine EJ, et al.
de la enfermedad litiásica. Se debe dar una
Sublingual hyoscyamine sulfate in combination
orden para practicar una urografía excretora, with ketorolac tromethamine for ureteral colic: a
previa medición de la creatinina sérica. La uro- randomized, double-blind, controlled trial. Ann
grafía se puede suplir con una radiografía sim- Emerg Med 2001; 37:141-146.
ple de abdomen si se cuenta con una urografía 4. Koelliker C. Acute urinary obstruction: imaging
reciente. Se debe dirigir el paciente hacia una update. Urol Clin North Am 1997; 24: 231-243.
consulta urológica, puesto que la desaparición 5. Netto NR Jr, Ikonomidis J, Zillo C. Routine ureteral
stenting after ureteroscopy for ureteral lithiasis: is
del dolor no es signo de expulsión de la pie- it really necessary? J Urol 2001; 166:1252-1254.
dra. Como analgésicos de uso domiciliario se 6. Spencer BA, Wood BJ, Dretler SP .Helical CT and
recomiendan: acetaminofén 500 mg, codeína ureteral colic. Urol Clin North Am 2000; 27:571-
30 mg (Winadeine F ®) 1-2 tabletas hasta seis 582.

859
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO III

Retención urinaria aguda

Adolfo Serrano-Acevedo, MD
Sección de Urología
Fundación Santa Fe de Bogotá

GENERALIDADES

L a retención urinaria aguda es uno de los


varios desenlaces que pueden presentar-
se ante la progresión de un cuadro de obstruc-
La hiperplasia prostática se manifiesta como
aumento palpable de la próstata y se presen-
ta en el 50% de los hombres. El 25% percibe
ción del tracto urinario inferior por hiperplasia síntomas obstructivos. La retención urinaria
prostática, cáncer de próstata o estrechez aguda se presenta hasta en 5% de todos los
uretral. hombres. A mayor edad, mas frecuencia de
hiperplasia, síntomas y retención urinaria agu-
La retención urinaria aguda puede estar asocia- da: ocurre hasta en 10% de los mayores de
da con otras condiciones clínicas, como trauma 60 años y en 30% de los mayores de 80 años.
raquimedular, neuropatía periférica, infección uri-
naria, puerperio, postoperatorios, urolitiasis, tu-
mores pélvicos, etc., en las cuales no necesa- PRESENTACIÓN CLÍNICA
riamente existe obstrucción. La situación más
frecuente y a la cual se refiere esta guía, es la El individuo con retención urinaria aguda re-
retención urinaria aguda por hiperplasia prostá- lata una historia bastante típica. Usualmente
tica. La otras son situaciones menos comunes, se trata de hombres mayores de 50 años que
cada una con su propio tratamiento. pueden o no estar experimentando síntomas
sugestivos de obstrucción del tracto urinario
inferior; de estos son usuales el chorro miccio-
ETIOPATOGENÍA nal de calibre variable, intermitente o disminui-
do, sensación de micción incompleta, demo-
El tejido hiperplásico prostático puede crecer ra o esfuerzo para iniciar la micción y aumen-
hacia el interior de la glándula y obstruir la to en la frecuencia urinaria por evacuación in-
uretra que pasa por allí. Inicialmente se pre- completa. También hay pacientes en los cua-
senta hipertrofia del detrusor como respuesta les la retención urinaria aguda puede ser la
compensatoria por parte de la vejiga. Si la obs- primera manifestación de obstrucción. En ge-
trucción progresa o se dan circustancias como neral la retención urinaria aguda se precipita
la sobredistensión de la vejiga o el consumo en situaciones como posponer voluntariamen-
de medicamentos con efecto anticolinérgico te la micción (por ejemplo durante un viaje
o con efecto adrenérgico, la respuesta com- prolongado) o ingerir alcohol. También se pue-
pensatoria es insuficiente y se produce la re- de asociar al consumo de medicamentos para
tención urinaria aguda. el resfriado, que frecuentemente contienen

860
CAPÍTULO III: RETENCIÓN URINARIA

agentes alfa adrenérgicos, los cuales favore- Se debe practicar hemograma, en el cual la
cen la contracción del cuello vesical, o a diver- presencia de anemia sugiere obstrucciones de
sos psicofármacos que por su efecto antico- larga data asociadas a uropatía obstructiva.
linérgico reducen la contractilidad de la vejiga. El recuento y distribución de la línea blanca
El cuadro progresa en horas o días, desde señala la presencia de infecciones urinarias.
micciones con volúmenes y calibres del chorro
cada vez menores hasta la completa imposi- La medición de la creatinina sérica da razón
bilidad para emitir la orina. El individuo ingre- sobre el compromiso obstructivo, agudo o cró-
sa quejándose de dolor suprapúbico y con nico; las cifras elevadas justifican la determi-
gran ansiedad. nación de electrolitos séricos y eventualmen-
te decidir la hospitalización.
En el examen físico los hallazgos más promi-
nentes son dolor y masa suprapúbicos eviden- El uroanálisis es un examen indispensable.
tes mediante la palpación o la percusión. La Se debe obtener después de evacuar la orina
situación puede ser más compleja en casos y aliviar al paciente; la presencia de leucocitos,
en que éste es el final de una obstrucción cró- bacterias o nitritos son hallazgos indicativos
nica y también se encuentran signos de uropa- de infección urinaria. Se recomienda obtener
tía obstructiva e insuficiencia renal crónica. muestras para cultivo.

Puede darse la asociación con infecciones uri- Se contraindica la realización de antígeno


narias de diversos grados de severidad, que prostático específico en este momento: tanto
varían desde la presencia de orina turbia y en la retención urinaria aguda como en pre-
mal oliente acompañada de síntomas irritati- sencia de infección urinaria sus cifras se ele-
vos hasta el piocisto con importante compro- van y pierden todo su valor.
miso sistémico. Dentro de la evaluación gene-
ral es de importancia cardinal el examen digital En el servicio de urgencias no se justifica la
rectal, el cual provee información sobre tama- evaluación por imágenes porque los resulta-
ño y consistencia de la glándula; pero es más dos no hacen variar el tratamiento que se debe
importante en ese momento identificar una proporcionar en ese momento y lugar.
prostatitis aguda, entidad en que la próstata
se palpa caliente y puede evidenciarse la pre-
sencia de áreas reblandecidas. En casos de TRATAMIENTO
prostatitis aguda asociada a retención urina-
ria la derivación más recomendable es la Por simple lógica es evidente que el tratamien-
suprapúbica. La evaluación digital rectal tam- to inmediato es la evacuación de la vejiga; el
bién puede hacer evidente la presencia de procedimiento es el siguiente:
induración, nódulos o pérdida de los recesos,
características del cáncer prostático. • La técnica de cateterismo debe ser estéril,
con cuidadoso lavado de los genitales.
• Se debe lubricar abundantemente la ure-
EXÁMENES PARACLÍNICOS tra con gel hidrofílico. Para tal efecto reco-
mendamos la colocación de la boquilla del
El reconocimiento de este cuadro clínico es tubo de lubricante directamente dentro del
sencillo. Los exámenes paraclínicos dan infor- meato y la expresión de unos 10 ml del con-
mación sobre la complejidad de la situación. tenido. Una alternativa es llenar con lubri-

861
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cante una jeringa de 10 cc y aplicarlo den- niobra, segura y sencilla, da alivio temporal
tro del meato. mientras se hace la derivación definitiva.
• Se deben usar catéteres de calibre 18 Fr. • Las maniobras que puede practicar el uró-
Los elementos de menor calibre tienen ma- logo son la dilatación uretral en caso de
yor dificultad en el paso por no tener consis- estrecheces, el paso guiado mediante con-
tencia suficiente para progresar. Se debe ductores o por endoscopía, o la derivación
abandonar la falsa creencia de que estos suprapúbica con un tubo de cistostomía.
elementos son demasiado gruesos para la En general se hacen intentos de derivación
luz uretral. uretral pero si fueran infructuosos o si se
• El catéter se debe avanzar es su totalidad trata de una prostatitis aguda, se procede
para evitar inflar el balón en la uretra o la prós- con la cistostomía. Este procedimiento se
tata. ¡Nunca insistir si no se logra el paso fá- puede practicar a cielo abierto, por punción
cil y completo del catéter! ¡Nunca inflar el ba- con un trócar o con equipos desechables
lón hasta no pasar por completo el catéter! diseñados para este fin. La cistostomía es
• El balón se debe inflar con agua estéril; un procedimiento expedito que soluciona
cualquier otro líquido puede obstruir la vía esas situaciones difíciles.
de inflado. El volumen para inflar el balón
debe ser el marcado en el catéter, que ge-
neralmente es de 5 cc. El sobreinflado no INDICACIONES
impide que un paciente ebrio o confuso se DE HOSPITALIZACIÓN
arranque la sonda y se produzca lesiones
mucho más graves. No se debe utilizar aire, La mayoría de los pacientes serán derivados
las válvulas de los catéteres no están di- y dados de alta. Se debe internar a aquellos
señadas para contenerlo y finalmente los que evidencien infecciones urinarias severas:
balones se desinflan. pielonefritis, piocistitis, prostatitis. El síntoma
• Cuando han drenado unos 100 mL de orina cardinal es la fiebre; se suman dolor en los
se puede obtener una muestra para exáme- ángulos costovertebrales, signos de compro-
nes. A continuación se hace conexión a un miso sistémico como malestar general, taqui-
sistema cerrado y se fija el catéter al hipo- cardia, taquipnea, hipotensión, orina purulen-
gastrio. La evacuación rápida puede pro- ta, secreción uretral purulenta o hallazgos su-
ducir hematuria (hemorragia ex vacuo), por gestivos de prostatitis aguda al examen rectal.
eso se sugiere drenar volúmenes de 100 a
200 mL y detener el flujo doblando la man- La uremia es sin duda indicación de hospitali-
guera del sistema colector por unos dos zación; sin embargo, la elevación de la creati-
minutos, para luego reanudarlo. nina sérica con valores inferiores a 2,5 mg/dL
• No se deben practicar evacuaciones y reti- puede ser tratada en forma ambulatoria. Ele-
rar el catéter. El 50% de los pacientes, re- vaciones mayores se pueden acompañar de
tornará en el lapso de una semana. importante desequilibrio hidroelectrolítico pre-
• En caso de no poder pasar el catéter se vio al cateterismo o posterior al mismo por la
debe pedir el concurso del urólogo. Mien- diuresis masiva (fase poliúrica) que se pre-
tras se hace presente, una fácil forma de senta tras la derivación. Esos casos también
aliviar al enfermo es puncionar la vejiga por se deben hospitalizar.
vía suprapúbica (2 cm encima del pubis)
con una aguja calibre 18 de 10 cm de largo La otra indicación de tratamiento hospitalario
y extraer unos 100 mL de orina. Esta ma- es la hematuria. No el observar la orina colo-

862
CAPÍTULO III: RETENCIÓN URINARIA

reada, sino la presencia franca de sangre y LECTURAS RECOMENDADAS


coágulos.
1. Chacko KN, Donovan JL, Abrams P, et al.
Transurethral prostatic resection or laser therapy
for men with acute urinary retention: the ClasP
ORDENES AL EGRESO randomized trial. J Urol 2001; |166:166-70;
discussion 170-171.
Se debe instruir al paciente sobre el manejo 2. Choong S, Emberton M. Acute urinary retention.
del catéter uretral; no lo debe traccionar y BJU 2000; 75:186-201.
siempre debe estar pegado con esparadrapo 3. Corujo M, Badlani GH, Regan JB, et al. A new
a la piel. El único elemento que debe manejar temporary catheter (ContiCath) for the treatment
es la válvula de drenaje del colector. Debe cui- of temporary, reversible, postoperative urinary
darse de no quebrar o enrollar la manguera retention. Urology 1999; 53:1104-1107.
de drenaje y el colector se debe portar a la 4. Florez P, Uribe JA. Fundamentos de Cirugía: Uro-
logía. Segunda edición .Corporación para investi-
altura del muslo. No se deben administrar anti-
gaciones biológicas. Medellín, 2000.
bióticos a menos que haya evidencia de in- 5. Kirby R, Fitzpatrick J, Boyle P, McConnell J,
fección urinaria. Roehrborn C. Textbook of benign prostatic hiper-
plasia. 2 edition. Taylor & Francis. London, 2001.
Se debe ser cuidadoso en el reemplazo de 6. McVary KT. Medical therapy for benign prostatic
agua y electrolitos puesto que durante la fase hyperplasia progression. Curr Urol Rep 2002;
poliúrica puede ocurrir pérdida importante de 3:269-275.
los mismos. Se recomienda el consumo de 7. Modi P, Pleat J, Cheetham P, Senior J, et al. A 23-
year review of the management of acute retention
caldos (“consomé”) como fuente de sodio y
of urine: progressing or regressing?. Ann R Coll
potasio y la ingestión de 70% del agua perdida. Surg Engl 2000; 82:333-335.
8. Swinn MJ, Wiseman OJ, Lowe E, Fowler CJ. The
Todos estos pacientes deben ser instruidos cause and natural history of isolated urinary reten-
para acudir a la consulta urológica donde se tion in young women. J Urol 2002;167:151-156.
terminará su evaluación y se darán las opcio- 9. Walsh, Retik, Vaughan, Wein. Campbells Urology.
nes de tratamiento. WB Saunders Company. Philadelphia, 2002.

863
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IV

Insuficiencia renal aguda

Emir Ancizar Ortiz, MD


Servicio de Urgencias
Fundación Cardioinfantil Instituto de Cardiología

DEFINICIÓN

L a falla renal aguda o insuficiencia renal


aguda (IRA) es un deterioro súbito de la
función renal con elevación persistente del ni-
• Oligúrica, cuando existe diuresis menor de
500 mL en 24 horas ó 5 a 10 mL /min.
• No oligúrica, cuando los volúmenes uri-
trógeno ureico y la creatinina en sangre, poten- narios son mayores.
cialmente reversible y que conlleva la altera-
ción de la homeostasis de agua y electrolitos. La falla no oligúrica tiene menor mortalidad y
Se caracteriza por un incremento de 0,5 mg/ mayor probabilidad de ser reversible.
dL (o de 50%) sobre el valor basal de la crea-
tinina sérica. También se la define como la dis-
minución del 50% en la depuración (“aclara- EPIDEMIOLOGÍA
miento”) de creatinina o como una disminución
aguda en la función renal que requiere diálisis. Las estadísticas mundiales reportan alrede-
dor de 200 casos de falla renal aguda por mi-
llón de habitantes por año, siendo la necrosis
CLASIFICACIÓN tubular aguda (NTA) con 45% la forma clínica
más frecuente, seguida por la falla renal de
Se clasifica en: tipo prerrenal (21%), la agudización de la fa-
1. Prerrenal, cuando se compromete la per- lla renal crónica y la uropatia obstructiva con
fusión sanguínea del riñón. 13% y 10% respectivamente; en nuestro me-
2. Renal o parenquimatosa, cuando existe dio se han reportado 55%-60% para la falla
lesión orgánica de las estructuras renales. prerrenal, 35%-40 % para la NTA y menos de
3. Post-renal u obstructiva, cuando hay obs- 5% para las causas obstructivas.
trucción de las vías urinarias a cualquier
nivel.
CAUSAS DE INSUFICIENCIA RENAL
Esta clasificación permite al médico corregir
el factor desencadenante diferenciando la le- Prerrenal:
sión parenquimatosa de las otras causas. • Disminución del volumen efectivo del liqui-
do extracelular (LEC): secundario a pérdi-
De acuerdo al volumen urinario se clasifica das de volumen, hemorragia, vómito, dia-
también en: rrea, quemaduras, diuréticos.

864
CAPÍTULO IV: INSUFICIENCIA RENAL AGUDA

• Redistribución del líquido extracelular (“ter- Obstructiva:


cer espacio”): peritonitis, pancreatitis, sín- • Obstrucción ureteral por ureterocele, vál-
drome nefrótico, obstrucción intestinal, he- vulas uretrales, vejiga neurogénica, hiper-
patopatía. trofia prostática benigna, litiasis, ligadura
• Disminución del gasto cardíaco: shock car- ureteral accidental.
diogénico, valvulopatías, miocarditis, infarto • De origen infeccioso como cistitis bacteria-
de miocardio, falla cardiaca congestiva, em- na, tuberculosis, aspergilosis, esquistoso-
bolismo pulmonar masivo, taponamiento miasis, candidiasis, actinomicosis.
cardíaco. • Por fibrosis retroperitoneales asociadas
• Vasodilatacion periférica: sepsis, hipoxe- con aneurisma aórtico, traumatismo, radia-
mia, antihipertensivos, hipercapnia severa, ción, o inducidas por fármacos (ácido ami-
shock anafiláctico. nocaproico, ergotamina, sulfamidas).
• Vasoconstricción renal: inhibidores de la
síntesis de prostaglandinas, agonistas alfa
adrenérgicos, síndrome hepatorrenal, hi- DIAGNÓSTICO
percalcemia.
• Vasodilatación de la arteriola eferente: inhi- El diagnóstico se basa en la elevación de ni-
bidores de la enzima convertidora de angio- trógeno ureico (BUN) y la creatinina en un pa-
tensina, bloqueantes de los receptores de ciente con factores de riesgo. El aumento de
angiotensina. la creatinina es el parámetro de mayor con-
fiabilidad. De acuerdo con la causa desenca-
Parenquimatosa: denante, los pacientes pueden ser práctica-
• Necrosis tubular aguda isquémica por sep- mente asintomáticos, tener síntomas y signos
sis o persistencia de las causas prerre- de retención de líquidos o, por el contrario, de
nales. deshidratación.
• Por hemoglobina, malaria, hemólisis me-
cánica como ocurre con las prótesis mecá- Una buena anamnesis permite identificar las
nicas, transfusiones incompatibles, hemo- posibles causas, como pérdidas de líquidos
globinuria paroxística nocturna. por diarrea o vómito, uso de medicamentos o
• Nefritis túbulointersticial aguda (NTIA). sustancias nefrotóxicas u otros datos que su-
• Glomérulonefritis aguda (GNA) postinfec- gieran la formación de “tercer espacio”, pan-
ciosa, postestreptocóccica o postestafilo- creatitis o peritonitis. Son importantes también
cóccica, lupus eritematoso sistémico, glo- el tiempo de evolución de los síntomas y los
merulonefritis mesangial por inmunoglobu- datos aproximados del volumen urinario.
lina A (IgA), glomérulonefritis por anti-
cuerpos antimembrana basal glomerular. En el examen físico se debe evaluar el estado
• Necrosis cortical, como ocurre en el abor- de hidratación; en ancianos la humedad de
to séptico, abruptio placentae y coagula- mucosas y axilas, por ser ellos respiradores
ción intravascular diseminada (CID). bucales que carecen del mecanismo de la sed
• Oclusión vascular por trombo o émbolo bi- como parámetro fiable de deshidratación; la
lateral de arterias renales, vasculitis, sín- ingurgitación yugular; la medición de la presión
drome hemolítico urémico, púrpura trom- arterial y la frecuencia cardiaca en posición
bolítica trombocitopénica, esclerodermia, sentada y en decúbito.
síndrome antifosfolípido.

865
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EXÁMENES DE LABORATORIO a la función renal, considerar la infección como


complicación potencialmente letal.
Además del BUN y la creatinina en sangre, el
cuadro hemático usualmente ayuda para eva-
La administración o la restricción de líquidos
luar la pérdida sanguínea aguda o crónica. Los
deberá basarse en los hallazgos clínicos y de
electrolitos sodio y potasio son de crucial im-
laboratorio arriba mencionados.
portancia para determinar la osmolaridad ante
complicaciones agudas como puede ser el
En azohemia prerrenal el objetivo es corregir
estado hiperosmolar y cetoacidótico de la dia-
la hipoperfusión. Se prefiere el uso de crista-
betes. La disminución del calcio, con hiper-
loides como solución salina normal, debiendo
fosfatemia, suele acompañar a la falla renal,
asegurarse la corrección de la depleción de
tanto aguda como crónica.
volumen y de cualquier grado de deshidrata-
ción subclínica.
Tradicionalmente usados, pero de utilidad li-
mitada en la práctica clínica, son los llama-
Las pruebas de diuresis forzada, siempre con-
dos índices de falla renal, como la fracción
trovertidas, requieren la certeza clínica de ha-
excretada de sodio (FENA), el sodio urinario
ber corregido cualquier grado de hipovolemia
o la densidad de la orina.
ya que se corre el riesgo de empeorar la falla
con diuréticos de asa, como la furosemida. Se
El sedimento urinario con presencia de cilin-
inicia con bolos de 20 mg cada hora. Actual-
dros granulosos orienta hacia NTA; los cilin-
mente se emplea una dosis de 40-100 mg, 2-5
dros hemáticos sugieren daño glomerular, los
ampollas IV precedidos, para asegurar volu-
leucocitarios indican nefritis tubulointersticial;
men adecuado del espacio intravascular, de 50-
la piuria y la hematuria suelen acompañar la
100 mL de manitol al 20% (10-20 g) para infun-
falla de origen obstructivo o postrenal.
dir en 30 minutos. El objetivo es conseguir una
diuresis de 20 a 40 mL hora en las siguientes
cuatro horas; de no lograrlo, se puede admi-
IMÁGENES DIAGNÓSTICAS
nistrar una segunda dosis de furosemida.
La ecografía renal puede mostrar riñones de
tamaño normal o aumentado en la falla agu- En la actualidad se usa con frecuencia la in-
da, o riñones pequeños con pérdida de la re- fusión de furosemida, 1 mg/kg/hora por seis
lación córticomedular en la mayoría de los ca- horas, aunque no cuenta con soporte suficien-
sos de falla crónica. Sirve además para des- te para su recomendación de rutina. Debe
cartar hidronefrosis y obstrucción ureteral. recordarse que la furosemida es ototóxica.

La dopamina, en dosis de 0,5 a 2,0 µ/kg/min


TRATAMIENTO aunque dilata las arteriolas renales e incre-
menta el flujo sanguíneo renal no ha demos-
Debe dirigirse a controlar la causa subyacen- trado ser eficaz para mejorar la falla no oligú-
te y a corregir los trastornos hidroelectroliticos, rica; por tanto, no se recomienda su uso rutina-
siendo muy importante diferenciar la NTA de rio a pesar de que sigue siendo una práctica
la falla prerrenal. usual.

Evitar siempre el uso de sustancias nefrotó- La hiperkalemia es, junto al edema pulmonar
xicas, ajustar las dosis de los medicamentos y la acidosis metabólica, de las complicaciones

866
CAPÍTULO IV: INSUFICIENCIA RENAL AGUDA

agudas más graves; debe corregirse (diálisis LECTURAS RECOMENDADAS


inmediata) cuando se acompaña de cambios
electrocardiográficos, usualmente ondas T 1. Barri Y,Shah S. Prevention and nondialytic
altas picudas de base ancha en varias deri- management of acute renal failure. En: Current
vaciones, o trastornos en la conducción AV. Therapy in Nephrology and Hipertension. R
Glassock (ed). Mosby- Year Book, St Louis, 1998.
El tratamiento debe dirigirse a evitarlas o a
2. Bouman CS, Oudemans-Van Straaten HM, et al.
instaurar una terapia puente, hasta cuando el Effects of early high-volume continuous
paciente pueda llegar a un centro de diálisis. venovenous hemofiltration on survival and
recovery of renal function in intensive care patients
Sólo en acidosis metabólica severa con pH with acute renal failure: a prospective, randomized
menor de 7,1 y HCO3 por gasimetria menor trial. Crit Care Med 2002; 30:2205-2211.
de 10 se indica el uso de 4-8 ampollas de bi- 3. Pascual J, Liaño F,Ortuño J: The elderly patient
carbonato de sodio (40-80 meq/L), recordan- with acute renal failure. J Am Soc Nephrol 1995;
6:144-153.
do que puede favorecer el edema pulmonar y
4. Klahr S, Miller SB : Acute oliguria. N Engl J Med
la acidosis posterior a su administración. 1998; 338:671-675.
5. Thadhani R,Pascual M, Bonventre JV. Acute re-
Finalmente debe recordarse que la hiperka- nal failure. N Engl J Med 1996; 334:1448-60.
lemia, la acidosis metabólica refractaria, el
edema pulmonar y la anuria mayor de 24 ho-
ras tienen como único tratamiento la diálisis o
el reemplazo renal temporal o definitivo.

867
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Hematuria

Alfonso Latiff Conde, MD


Sección de Urología
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a hematuria se refiere a la presencia de


sangre en la orina, macroscópica o micros-
cópica, la cual puede venir de cualquier parte
gran aumento en la evaluación microscópica
del sedimento urinario en 2 ó 3 especímenes
urinarios adecuadamente recogidos.
del tracto urinario y puede ser un signo de en-
fermedad seria subyacente, que incluye cán- En el estudio de pruebas positivas intermiten-
cer. La literatura soporta el concepto que la tes de hematuria con más de 3 eritrocitos en
presencia de hematuria macroscópica, que es 2 ó 3 especimenes adecuadamente recolec-
un signo que usualmente lleva al paciente a tados, este hallazgo debe ser considerado
consultar, justifica una evaluación diagnóstica. como microhematuria y debe ser adecuada-
En general la hematuria microscópica es un mente evaluado.
hallazgo incidental.
Los pacientes de alto riesgo deben ser consi-
Ninguna organización recomienda en la actua- derados para evaluación urológica completa
lidad tamizaje para la hematuria microscópica cuando se han encontrado 3 ó más eritrocitos
en adultos asintomáticos, aunque el cáncer en campo de gran aumento. La hematuria ma-
de la vejiga es la lesión maligna más común- croscópica debe ser profusa para determinar
mente detectada en estos pacientes. Sin em- un cambio en la coloración de la orina y en el
bargo, el uroanálisis sigue siendo un com- examen microscópico los eritrocitos no mues-
ponente importante de cualquier “chequeo” tran cambios morfológicos o son mínimos. La
médico. hematuria que compromete el glomérulo re-
nal casi siempre se acompaña de cilindros he-
La hematuria se puede medir cuantitativamen- máticos y los eritrocitos exhiben una distor-
te mediante la determinación del número de sión en su forma, las llamadas células dismór-
eritrocitos por mililitro de orina excretada o por ficas. La proteinuria puede acompañar las he-
el recuento microscópico del sedimento uri- maturias de origen local, si ésta es severa,
nario centrifugado. pero siempre se detecta en las hematurias
secundarias a enfermedad renal difusa.

DEFINICION
FACTORES DE ALTO RIESGO
Se define como la presencia evidente de san-
gre en la orina. Puede estar acompañada de • Edad mayor de 40 años.
coágulos. Hematuria microscópica es la pre- • Cigarrillo.
sencia de 3 ó más eritrocitos por campo de • Abuso de analgésicos.

868
CAPÍTULO V: HEMATURIA

• Irradiación pélvica. renal (6) y ejercicio (7). La presencia de


• Schistosoma hematobium. leucocitos o piocitos sugiere inflamación o
• Ciclofosfamida. infección del tracto urinario, pero también
• Exposición a colorantes y compuestos del pueden acompañar una respuesta inflama-
caucho. toria en la glomerulonefritis. Pueden verse
• Industriales (benzenos, aminas aromaticas). eosinófilos urinarios en la nefritis intersticial
• Historia de enfermedad urológica. aguda. Eritrocitos urinarios de varios tama-
• Historia de trastornos irritativos de la mic- ños, formas y contenidos de hemoglobina
ción. (dismorficos) indican un proceso glomerular
• Enfermedades hemorrágicas. y aquellos con un carácter uniforme (iso-
• Sobredosis de anticoagulantes. mórficos) un proceso no glomerular. La pre-
• Embolia renal. sencia de ambas poblaciones no es espe-
• Glomerulonefritis aguda. cífica.
• Trauma. • Evaluación imagenológica: aunque la
Urografía Intravenosa constituye el mejor
procedimiento para la evaluación de la ana-
EVALUACIÓN DE LA HEMATURIA tomía del tracto urinario alto en el paciente
con hematuria, su rol ha sido cuestionado
Historia y examen físico: la historia médica recientemente (8). La pielografía retrógra-
es el punto de partida de la evaluación y fre- da debe practicarse cuando la urografía no
cuentemente por sí sola determina el diagnós- visualiza todo el tracto urinario. A pesar de
tico. Una buena revisión de medicamentos es que la urografía intravenosa es fácilmente
importante, porque numerosas drogas indu- accesible y de bajo costo, su sensibilidad
cen hematuria. Los pacientes que reciben anti- es menor en la detección de masas renales
coagulantes deben ser especialmente pequeñas. Algunos autores consideran que
evaluados. un ultrasonido renal puede reemplazarla
con una mínima disminución de la capaci-
El examen físico incluye examen para hiper- dad diagnóstica, pero falla en la detección
tensión, arritmia cardiaca, petequias, angio- de algunos cálculos ureterales y, lo más
mas, nefropatía y pérdida de la audición (Sin- grave, aun en tumores uroteliales del sis-
drome de Alport), soplos cardiacos, masas tema colector. Tal estrategia es preferible
abdominales, edema, lesiones en la próstata, en el paciente de alto riesgo de nefropatía
genitales externos y uretra. por medio de contraste.
En este caso se sugiere una Tomografía
Laboratorio: Axial Computadorizada (TAC) por su ma-
• Estudios de coagulación, con seguimien- yor sensibilidad para detectar lesiones me-
to periódico. nores de 3 cm y aquellas que no deforman
• Uroanálisis: inspección de la orina. La en- directamente el sistema pielocalicial. La
fermedad glomerular está acompañada de TAC es la modalidad preferida para la de-
proteinuria, cilindros hemáticos, morfología tección de masas renales solidas, y es com-
anormal de los eritrocitos (4). La proteinuria parable con la Resonancia Magnética, pero
ha sido descrita con hematuria severa en más accesible y menos costosa. Es la me-
el tracto urinario distal y eritrocitos en la jor modalidad para la detección de cálcu-
nefritis intersticial, nefropatía diabética (5), los, infecciones renales y perirenales, con
embolismo renal (6), trombosis de la vena una sensibilidad de 94-98% para detección

869
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de cálculos renales. La urografía helicoidal El descubrimiento temprano de una enferme-


con TAC es un excelente complemento. dad que amenaza la vida es costo-efectivo.
• Uretrocistoscopia: detecta el cáncer de El 92% de los cánceres urológicos detecta-
vejiga con una sensibilidad de 87% (9). dos al investigar la hematuria, son lesiones
Los cánceres que pueden escapar son los tempranas que son diagnosticadas y tratadas
carcinomas in situ. La cistoscopia no debe más económicamente que las lesiones tar-
ser pospuesta, porque una lesión que san- días.
gra intermitentemente puede escaparse.
• Citología urinaria: en series grandes la
citología urinaria ha tenido una sensibilidad TRATAMIENTO
de 67% y una especificidad de 96% en la
detección del cáncer urotelial, especial- La hematuria masiva se trata en el servicio de
mente de la vejiga. Se debe practicar en urgencias. Se entiende por hematuria masiva
una muestra de orina fresca, lavados vesi- aquella que forma coágulos, o bien cuando
cales o cepillados endoscópicos (10). En causa retención urinaria. En estos casos debe
el carcinoma in situ de la vejiga la citología instalarse una sonda vesical, tanto para lavar
puede ser positiva antes de ser detectado la vía urinaria como para vigilar la magnitud
por la cistoscopia. del sangrado. Muchos sangrados se detienen
• Biopsia renal: no hay consenso sobre la espontáneamente. El tratamiento específico
indicación de la biopsia renal. Los oponen- depende del diagnóstico definitivo y debe ser
tes creen que los resultados de la biopsia realizado por personal especializado:
no han afectado el tratamiento de aquellos
pacientes con hipertensión, reducida de- • Enfermedad glomerular: consultar con
puración de creatinina o proteinuria. Otros nefrólogo.
encuentran que la biopsia renal cambió la • Tumores renales: generalmente su trata-
terapia en algunos pacientes con hematuria miento es quirúrgico, consultar con urólogo.
y con proteinuria. Los hallazgos más co- • Enfermedad poliquística: los episodios he-
munes son: matúricos que se presentan en esta enfer-
- glomerulonefritis proliferativa, especial- medad se tratan en forma conservadora
mente nefropatía Ig A. con buen manejo de la infección urinaria.
- glomerulonefritis difusa proliferativa, en- Toda instrumentación debe ser evitada.
fermedad de la membrana basal. • Tuberculosis renal: ver esquema de trata-
miento del Ministerio de la Protección So-
cial. La cirugía ureteral reconstructiva es
SEGUIMIENTO ocasionalmente necesaria si evoluciona el
proceso de fibrosis.
El cáncer urológico se presenta en el segui- • Hematuria inducida por drogas: cualquier
miento en 1-3% de los pacientes con micro- droga sospechosa de producir hematuria
hematuria y en 18% de los pacientes con debe ser suspendida inmediatamente.
macrohematuria. • Otras causas: el tratamiento de la hematu-
ria causada por necrosis papilar y trauma
Un método adecuado de seguimiento es la renal es el correspondiente a cada
realización de uroanalisis y citología cada 6 patología.
meses, y una urografía intravenosa cada año,
por 3 años si la hematuria persiste.

870
CAPÍTULO V: HEMATURIA

LECTURAS RECOMENDADAS disease, hematuria and malignant disease. Eur J


Radiol 1988; 8:135-139.
1. Grossteld GD, Carrol PR. Evaluation of 9. Jones DJ, Lang Staff RJ, Holt SD, Morgans BT.
asymptomatic microscopic hematuria. Urol Clin The value of cystourethroscopy in the investigation
of microscopic hematuria in adult males under 40
North Am 1998; 25:661-76.
years. A prospective study of 100 patients. Br J
2. U.S. Preventive Services Task Force guide to
Urol 1988; 62:541-545.
clinical preventive services 2nd ed. International 10. Zein T, Wajsmanz, Englander LS. Evaluation of
Medical Publishing. Alexandria, Va. 1996. bladder washings and urine cytology in the diag-
3. Gyory AZ, esson AM,Talbot JM. Microscopy of nosis of bladder cancer and its correlation with
urine – now you see it – now you don´t. Am Heart selected biopsies of the bladder mucosa. J Urol
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871
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Enfermedad pélvica inflamatoria

Edith Ángel Müller


Profesora Asociada
Departamento de Obstetricia y Ginecología
Universidad Nacional de Colombia
Instituto Materno Infantil
Bogotá

DEFINICIÓN

L a enfermedad pélvica inflamatoria (EPI) es


la infección del endometrio, de las trom-
pas de Falopio, ovarios y/o de las estructuras
Las mujeres menores de 30 años son las de
más frecuente hospitalización por la enferme-
dad, aunque el absceso tubo-ovárico es ge-
pélvicas adyacentes, causada por microorga- neralmente una enfermedad de mujeres algo
nismos de transmisión sexual y por otras bac- mayores.
terias que ascienden de la vagina.
Como en otras enfermedades transmitidas se-
xualmente, las mujeres solteras y sexualmente
EPIDEMIOLOGÍA promiscuas son las más afectadas por EPI.
Las mujeres con múltiples compañeros sexua-
Anualmente se presentan 3-9 casos de EPI
les tienen un riesgo 4,5 veces mayor que las
aguda por 1.000 mujeres entre los 15 y los 44
monogámicas. Se ha encontrado como factor
años, y 12-18 casos por 1.000 mujeres de 15-
de riesgo de mayor significación el tener más
24 años. En Estados Unidos la tasa de hospi-
de un compañero sexual en los 30 días previos
talización por EPI es del 5,3%, muy semejan-
a la infección, más que el número total de com-
te a la encontrada en el Instituto Matero Infantil
pañeros que hubiese podido tener en el trans-
de Bogotá en 1989.
curso de su vida.

FACTORES DE RIESGO La presencia o historia de otras ETS incre-


menta el riesgo de adquirir EPI. Se ha encon-
Las mujeres jóvenes, generalmente en la se- trado que el antecedente de EPI de etiología
gunda o tercera década de la vida, son las gonocócica es un factor de riesgo para episo-
más afectadas por esta enfermedad, lo cual dios subsecuentes de EPI no gonocócica.
parece depender de la alta prevalencia de en-
fermedades de transmisión sexual (ETS) en Los métodos anticonceptivos de barrera, los
este grupo de edades, la falla en el uso de cuales presumiblemente bloquean la exposi-
métodos anticonceptivos y la tendencia a la ción a los organismos de transmisión sexual
ectopia cervical que favorece el desarrollo de y al semen, parecen disminuir el riesgo relati-
infección por chlamydia y gonococo. vo de hospitalización por EPI, al reducir el

872
CAPÍTULO VI: ENFERMEDAD PÉLVICA INFLAMATORIA

riesgo de enfermedades de transmisión se- Hacia la década del 70, al mejorar los métodos
xual. El uso de anticonceptivos orales reduce de aislamiento y de cultivo, se aislaron gran
la tasa de ataque, posiblemente, por reducción cantidad de diferentes anaerobios y aerobios.
del volumen y duración del sangrado mens- Esto puso en evidencia la naturaleza polimi-
trual, por alteraciones del moco cervical y de crobiana de la salpingitis aguda y modificó el
factores inmunológicos. Por otra parte, el uso concepto de predominio de la enfermedad
del DIU incrementa el riesgo de desarrollar EPI gonocócica en la EPI.
en los primeros cuatro meses de la inserción.
El DIU actúa por su “efecto de cuerpo extra-
ño”, que facilita la presencia de bacterias en FISIOPATOLOGíA
el tracto genital superior, porque rompe la in-
tegridad del moco cervical y del endometrio y Los órganos genitales femeninos internos
disminuye las defensas por la presencia de (útero, ovarios y trompas) son microbiológica-
minerales y por afectar los polimorfo nuclea- mente estériles, excepto por pequeños inócu-
res. Se ha encontrado que las duchas vagina- los transitorios de bacterias que ocurren es-
les incrementan el riesgo de EPI en 73%. pecialmente durante las menstruaciones.

La EPI puede producirse cuando las bacterias


ETIOLOGÍA ascienden al tracto genital superior. Por su-
puesto, la competencia inmunológica intrínse-
La literatura anglosajona considera dos formas ca y otras variables como el estado nutricional,
de salpingitis aguda: gonocócica y no gono- determinan en gran parte la susceptibilidad de
cócica, principalmente con base en los resul- una paciente a la agresión bacteriana.
tados de los cultivos endocervicales.
Algunos casos de EPI y de absceso pélvico
En un estudio sueco se demostró que dos ter-
pueden ser consecuencia de instrumentación
cios de las mujeres jóvenes con EPI tenían
del tracto genital femenino. Los procedimien-
evidencia directa (cultivo) o indirecta (serolo-
tos como legrado uterino, inserción de un DIU,
gía) de infección con Neisseria gonorroheae,
persuflación, hidrotubación o histerosalpingo-
Mycoplasma hominis o Chlamydia trachoma-
grafía, pueden facilitar la contaminación del
tis. En los Estados Unidos se ha demostrado
tracto genital superior por bacterias aerobias
colonización con Neisseria gonorroheae,
y anaerobias que son residentes normales de
Chlamydia trachomatis (o ambas) en 50% de
la vagina y el cérvix. También se puede pro-
mujeres con EPI aguda.
ducir EPI por continuidad de infecciones en
En países africanos en desarrollo, se ha infor- órganos adyacentes, como apéndice y colon.
mado una frecuencia de 12-65% de salpingi-
tis aguda gonocócica. En países desarrollados Como resultado de esta infección ascendente
la frecuencia de aislamientos de gonococo en que alcanza las trompas y de la reacción infla-
el cérvix ha variado desde 6-70% y se ha im- matoria que se produce, van a ocurrir dentro
plicado como su principal causante. No obs- de la trompa fenómenos de vasodilatación, tra-
tante, el aislamiento positivo a partir del cérvix, sudación de plasma y destrucción del endosal-
no significa que sea la etiología de la infec- pinx con la consiguiente producción de un exu-
ción genital alta, como se ha demostrado por dado purulento. En los primeros estadios de
cultivos tomados directamente del tejido afec- la enfermedad, la luz de la trompa permanece
tado a través de laparoscopia o colpocentesis. abierta con lo cual se permite que este

873
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

exudado salga por la fimbria hacia la cavidad Se han adoptado los siguientes criterios clíni-
pélvica, lo que produce peritonitis pélvica. Co- cos para el diagnóstico de la EPI:
mo resultado de esta inflamación peritoneal,
las estructuras adyacentes como ovarios, li- Criterios mayores o mínimos para hacer el
gamentos anchos, omento, intestino delgado, diagnóstico:
sigmoide y ciego se comprometen en el pro- • Dolor hipogástrico a la palpación.
ceso inflamatorio. La tensión de oxígeno en • Dolor a la movilización del cérvix.
estos tejidos inflamados y necróticos dismi- • Dolor a la palpación de los anexos.
nuye lo que favorece el crecimiento de flora
anaerobia. La destrucción del tejido con la Criterios menores:
posterior degradación lleva a la formación de • Temperatura de 38°C o más.
abscesos. • Material purulento obtenido por culdocen-
tesis o laparoscopia.
• Masa al examen físico o por ultrasonido.
CUADRO CLÍNICO • Leucocitosis mayor de 10.500/mm 3.
• VSG >15 mm/hora.
La forma de presentación de la EPI es muy • Evidencia de colonización cervical por go-
variada. El dolor abdominal es el síntoma más nococo o Chlamydia.
constante; se presenta en 95% de los casos, • Presencia de más de cinco leucocitos/cam-
y aunque es inespecífico, tiende a localizarse po de 100X en el Gram de secreción endo-
o a ser más intenso en los cuadrantes inferio- cervical.
res del abdomen. Generalmente es bilateral,
de intensidad variable que aumenta con el Para realizar el diagnóstico se considera que
coito, la exploración clínica, los cambios de deben estar presentes todos los criterios ma-
posición y la maniobra de Valsalva. En el exa- yores y por lo menos uno de los menores. El
men ginecológico se puede encontrar dolor a valor predictivo positivo del diagnóstico clínico
la movilización del cérvix, en útero o anexos. es de 65–90% comparado con el diagnóstico
En 5-10% de las pacientes puede encontrar- laparoscópico. Cuando se toman sólo dos cri-
se dolor en el hipocondrio derecho sugiriendo terios mayores y por lo menos uno menor, me-
perihepatitis o síndrome de Fitz-Hugh-Curtis: jora la sensibilidad del diagnóstico, pero se
adherencias inflamatorias de la cápsula he- pierde un poco de especificidad.
pática al peritoneo parietal.
La siguiente clasificación se basa en los ha-
Hasta 75% de las pacientes tienen leucorrea. llazgos clínicos:
Puede haber sangrado genital anormal causa- GRADO I No complicada, sin masa (limita-
do por endometritis. También puede encontrar- da a trompas y ovarios). Con o
se fiebre, náusea, vómito, distensión abdomi- sin signos de irritación peritoneal.
nal y disuria. Jacobson ha encontrado una GRADO II Complicada (masa o absceso que
correlación linear entre el número de variables involucra trompas y/o ovarios).
clínicas presentes en las pacientes y la confia- Con o sin signos de irritación peri-
bilidad del diagnóstico clínico. Las pacientes toneal.
con infección por Chlamydia pueden cursar GRADO III Diseminada a estructuras extra-
con salpingitis subclínica o subaguda, con pélvicas (absceso tubo-ovárico
secuelas de adherencias e infertilidad. roto o pelviperitonitis) o con res-
puesta sistémica.

874
CAPÍTULO VI: ENFERMEDAD PÉLVICA INFLAMATORIA

El diagnóstico diferencial del dolor abdominal PROCEDIMIENTOS ESPECIALES


agudo bajo en una mujer en edad reproductiva
incluye: La culdocentesis puede ser una ayuda diag-
• Embarazo ectópico. nóstica importante. Sin embargo, el líquido
• Apendicitis aguda. peritoneal purulento no garantiza el diagnós-
• Endometriosis. tico de EPI, pues cualquier inflamación den-
• Complicaciones de un quiste ovárico. tro del espacio peritoneal (apendicitis, enfer-
• Dolor funcional. medad inflamatoria del intestino) puede pro-
ducir líquido purulento.

AYUDAS DIAGNÓSTICAS La laparoscopia es el “patrón oro” en el diag-


nóstico de la EPI. El edema tubárico, el erite-
LABORATORIO ma y el exudado purulento confirman el diag-
nóstico, aunque el proceso inflamatorio pue-
Los exámenes de laboratorio que se solicitan de ocasionalmente haberse diseminado de
en forma inicial son: otros focos primarios (por ejemplo apendicitis).
1. Hemograma con VSG. El laparoscopista debe entonces observar el
2. Proteína C reactiva. apéndice y el abdomen superior. Sin embar-
3. Uroanálisis. go, cuando la enfermedad es leve, y se en-
cuentra principalmente en la luz de la trompa
Para buscar la etiológica microbiológica se y no en la serosa, la laparoscopia puede dar
solicita frotis en fresco y Gram de secreción falsos negativos. Debido a esto, actualmente
cervicovaginal, cultivo para N. gonorroheae y se considera que el estándar de oro es la
pruebas inmunológicas para detección de C. laparoscopia con biopsia de fimbria y prue-
trachomatis. Hay leucocitosis en menos de bas microbiológicas.
40% de los casos y su presencia no indica
que la causa sea necesariamente EPI; lo mis- En el Instituto Materno Infantil se realizó un
mo ocurre con la aceleración de la VSG. trabajo comparando el diagnóstico clínico de
enfermedad pélvica inflamatoria, con el diag-
La proteína C reactiva se encuentra elevada nóstico visual. En 66 de 76 pacientes (86,8%)
en 96% de las pacientes, y la respuesta al la laparoscopia confirmó el diagnóstico de EPI.
tratamiento se correlaciona con su disminu- En este grupo de pacientes, analizando el
ción. diagnóstico clínico de ingreso y el diagnósti-
co de certeza (establecido por laparoscopia
En algunos casos se puede realizar cultivo de y/o laparotomía), encontramos que los hallaz-
endometrio; cultivo de material peritoneal ob- gos clínicos tuvieron una sensibilidad de 92%
tenido por culdocentesis, laparoscopia o lapa- y un valor predictivo positivo de 85%.
rotomía y estudio del compañero sexual.
De acuerdo con los hallazgos laparoscópicos
o quirúrgicos se ha propuesto otra clasifica-
ción de la enfermedad:

875
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LEVE Trompas libres con eritema y edema, sin exudado purulento espontáneo, pero que puede aparecer al
manipular las trompas.
MODERADA Presencia de material purulento, eritema y edema más marcados. Las trompas pueden estar fijas y el
orificio de la fimbria puede estar obstruido.
SEVERA Piosálpinx o absceso

Por supuesto no se debe realizar laparoscopia dad de 90%, pero con la desventaja de que
a todas las pacientes con EPI, aunque algu- los resultados se obtienen dos a tres días mas
nos autores así lo recomiendan. Muchas pa- tarde.
cientes con EPI clínicamente obvia, pueden
ser tratadas directamente. Adicionalmente,
una paciente con distensión abdominal seve- EPI Y EMBARAZO
ra puede presentar riesgos técnicos y hacer
peligrosa la realización de la laparoscopia, La EPI probablemente complique al embara-
prefiriéndose la laparotomía. zo con mayor frecuencia de lo que se piensa.
El diagnóstico se confunde fácilmente debido
La ecografía es especialmente útil en los ca- a las múltiples causas de dolor abdominal y
sos en los cuales la paciente es difícil de exa- otros síntomas que ocurren durante el emba-
minar debido a obesidad, dolor severo o falta razo. Después de la semana 12 de gestación,
de cooperación durante el examen pélvico. el saco gestacional intacto forma una barrera
Los hallazgos ecográficos se han relacionado al ascenso de las bacterias cérvico-vaginales
con la severidad del proceso inflamatorio en al tracto genital superior, y por lo tanto es difí-
pacientes con EPI, pero esta técnica es más cil que se presente EPI. Sin embargo, se han
útil en la documentación de la resolución o propuesto otros mecanismos para el desarro-
aumento de las masas anexiales durante la llo de EPI en gestaciones ya avanzadas como
terapia antibiótica. Es posible detectar dismi- la diseminación linfática y vascular. La EPI y
nución de la resistencia vascular en la infec- el absceso tubo-ovárico se pueden presentar
ción pélvica aguda con la ayuda de la ultraso- durante el embarazo y deben incluirse en el
nografía doppler color transvaginal. diagnóstico diferencial de dolor abdominal en
estas pacientes, pues es importante un trata-
Técnicas de imagenología más complejas (co- miento pronto y adecuado para prevenir la
mo la tomografía axial computadorizada o la pérdida fetal.
resonancia nuclear magnética) raramente es-
tán indicadas en pacientes con infección pél-
vica. Sin embargo, procedimientos especiales TRATAMIENTO
como la pielografía intravenosa pueden ser
útiles en pacientes con abscesos pélvicos en El tratamiento integral de la paciente con EPI
los cuales es importante la localización de los incluye:
uréteres y otras estructuras pélvicas cuando 1. Evaluación de la severidad de la infección.
se planea un abordaje quirúrgico. 2. Administración de los antibióticos adecua-
dos.
La biopsia endometrial también ha sido utili- 3. Procedimientos quirúrgicos en los casos
zada para el diagnóstico, con una sensibili- indicados.

876
CAPÍTULO VI: ENFERMEDAD PÉLVICA INFLAMATORIA

4. Medidas de soporte. ren las cefalosporinas a las penicilinas. El


5. Tratamiento del compañero sexual. esquema es el siguiente (2002):

El objetivo del tratamiento es evitar las secue- Régimen A: cefoxitin 2 g IM + probenecid 1


las de la enfermedad. g VO o ceftriaxona 250 mg IM
seguido de:
La hospitalización está indicada en los siguien- tetraciclina 500 mg VO c/6 ho-
tes casos: ras por 10-14 días
1. Sospecha o diagnóstico de absceso pélvico o doxiciclina 100 mg VO c/12
o peritonitis. horas por 10-14 días
2. Curso clínico severo. Régimen B: ofloxacina 400 mg VO c/12 h
3. Síndrome séptico. por 14 días más metronidazol
4. Pacientes negligentes o de difícil segui- 500 mg c/12h por 14 días
miento.
5. Pacientes embarazadas. Es importante reexaminar a la paciente 24-48
6. Fracaso terapéutico al tratamiento ambu- horas después de iniciar la terapia, para eva-
latorio. luar la respuesta ya que hasta 10% de pa-
7. Posibilidad de tratamiento quirúrgico. cientes no responden a la terapia oral.

El tratamiento intrahospitalario se basa en el


TERAPIA ANTIMICROBIANA reposo, la hidratación parenteral, la adminis-
tración de antiinflamatorios no esteroideos y
Idealmente el tratamiento antibiótico debe di- toma de exámenes de laboratorio antes de
rigirse contra los microorganismos aislados en iniciar el tratamiento antibiótico. Los CDC re-
la trompa de Falopio; en la mayoría de los ca- comiendan los siguientes esquemas:
sos esto no es posible, por lo cual el tratamien-
to es empírico, con antimicrobianos que ten- Régimen A: cefoxitin 2 g IV c/6 horas
gan espectro contra los microorganismos más o cefotetan, cefotaxime o
comunes o más frecuentemente aislados ceftriaxona
como presuntos causantes. seguido de:
doxiciclina 100 mg IV o VO c/
Se han diseñado dos esquemas de manejo: 12 horas por 10-14 días
uno para pacientes ambulatorios (que son la Régimen B: gentamicina 80 mg IV c/8 horas
mayoría) y otro para pacientes hospitalizadas. + clindamicina 600 mg c/6 horas
Las recomendaciones del Centro de Control seguido de:
de Enfermedades de Atlanta (CDC) se basan doxiciclina 100 mg VO c/12
en que el régimen dado deberá cubrir N. gono- horas por 10-14 días
rroheae, C. trachomatis, anaerobios, incluyen- Régimen C: aztreonam 2-4 g/día IV + clin-
do B. fragilis y aerobios, incluyendo E. coli. El damicina 600 mg IV c/6 horas
CDC recomienda una dosis en bolo de anti-
biótico ß-lactámico (activo contra el gonococo) Los compañeros sexuales de la mujer se de-
seguida por una terapia prolongada de un anti- ben buscar y ofrecerles consejería y tamizaje
biótico anti-Chlamydia, usualmente, una tetra- para gonorrea y Chlamydia. Si no se puede
ciclina. En áreas donde prevalecen los gono- realizar el tamizaje, se aconseja tratamiento
cocos productores de penicilinasa, se prefie- empírico para estas dos infecciones.

877
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Estos esquemas fueron evaluados por Sweet, presentes entre las asas intestinales y los ór-
quien encontró con cefoxitin + doxiciclina una ganos pélvicos. Se determina la patología pél-
curación de 93-96% y con gentamicina + clin- vica con el fin de realizar la intervención más
damicina de 93%. También se ha usado cipro- conservadora posible dependiendo de los ha-
floxacina con eficacia de 90%. Los fracasos llazgos; si hay piosalpinx, se realiza salpingec-
se debieron a abscesos tubo-ováricos. Re- tomía, debido a que la cápsula del absceso
cientemente se ha propuesto el uso de pipe- es la pared de la trompa. En los abscesos tu-
racilina como droga única y se ha informado bo-ováricos en lo posible se trata de dejar el
de eficacia y seguridad hasta en 92% de los ovario en su lugar, aunque esto a veces no es
casos. posible, debido a que esta involucrado en la
infección. Cuando los abscesos son bilatera-
En las pacientes infectadas con el virus de la les, la infección ha sido recidivante y la pacien-
inmunodeficiencia humana a pesar de que la te ya completo su paridad, se realiza histe-
enfermedad se presenta con mayor severidad rectomía y salpingectomia bilateral. Se reali-
y que presenta un curso mas prolongado, se za lavado peritoneal, cierre de la fascia y cierre
pueden usar con seguridad los mismos regí- tardío de la herida quirúrgica. Si hay peritoni-
menes terapéuticos recomendados. tis difusa severa se podrá manejar con “ab-
domen abierto” (laparostomía).
En las pacientes con EPI que tienen el DIU,
éste debe retirarse después del segundo día
de tratamiento. Otra indicación para el retiro COMPLICACIONES
del DIU es el hallazgo de Actinomyces israelli.
Revisando sólo las consecuencias médicas
tenemos:
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO • 1/4 de todas las pacientes que experimen-
tan EPI van a desarrollar 1 ó más secuelas
Durante la era antimicrobiana el manejo qui- a largo término, siendo la más común e
rúrgico de la EPI ha disminuido, sin embargo, importante la infertilidad con un 20%.
se debe considerar la exploración quirúrgica • La tasa de embarazos ectópicos se incre-
en los siguientes casos: abdomen agudo, peri- menta de 6-10 veces en pacientes que han
tonitis generalizada, absceso tubo-ovárico ro- tenido EPI.
to, aumento del tamaño del absceso (absce- • Otras secuelas incluyen: dolor pélvico cró-
sos mayores de 8 cm generalmente no res- nico, dispareunia, pio o hidrosalpinx, abs-
ponden al tratamiento antibiótico) y sepsis que cesos tubo-ováricos, adherencias pélvicas
no mejora con la reanimación. que se estima ocurren en 15-20%.

La exploración quirúrgica ante la sospecha de


absceso pélvico se debe realizar a través de LECTURAS RECOMENDADAS
una incisión mediana para poder explorar toda
la cavidad peritoneal en busca de abscesos 1. Arredondo JL, Diaz V, Gaitan H, et al. Oral
clindamycin and ciprofloxacin versus intramuscular
metastásicos. Cualquier líquido o material pu-
ceftriaxone and oral doxycycline in the treatment
rulento encontrado debe enviarse a tinción de of mild-to-moderate pelvic inflammatory disease
Gram y a cultivo para aerobios y anaerobios. in outpatients. Clin Infect Dis 1997; 24:170-178.
Después de explorarse toda la cavidad abdo- 2. Crombleholme WR. Efficacy of single agent
minal, deben liberarse todas las adherencias therapy for the treatment of acute pelvic

878
CAPÍTULO VI: ENFERMEDAD PÉLVICA INFLAMATORIA

inflammatory disease with ciprofloxacin. Am J Med 8. Peipert J, Boardman L, Hogan J, et al. Laboratory
1989; 87:142S-147S. evaluation of acute upper genital tract infection.
3. Cunningham FG, Hauth JC, Gilstrop LC, et al. The Obstet Gynecol 1996; 87:730-736.
bacterial pathogenesis of acute inflammatory 9. Ross JD. An update on pelvic inflammatory
disease. Obstet Gynecol 1978; 52:161-164. disease. Sex Transm Infect 2002; 8:18-19.
4. Eschenbach DA, Wölner Hanssen P, et al. Acute 10. Sexually transmitted diseases Treatment
pelvic inflammatory disease: associations of Guidelines 2002. MMWR 2002 Vol 51 No. RR06;
1. (www.cdc.gov/mmwr/PDF/RR/RR5106.pdf).
clinical and laboratory findings with laparoscopic
11. Sweet R, Gibbs R. Infectious Diseases of the
findings. Obstet Gynecol 1997; 89:184-192.
Female Genital Tract. Williams & Wilkins.
5. Gaitán DH, Angel ME, Ruiz AI. Importancia de la Baltimore, 1990.
laparoscopia en el diagnóstico de la enfermedad 12. Walters MD, Gibbs RS. A randomized comparison
pélvica inflamatoria. Rev Col Obstet Ginecol 1994; of gentamicin-clindamicin in the treatment of pelvic
45:143-150. inflammatory disease. Obstet Gynecol 1990;
6. Hager WD, Eschembach DA, Spence MR, et al. 75:867-872.
Criteria for diagnosis and grading of salpingitis. 13. Zaldívar A, Calderón E, Arredondo JL. Enferme-
Obstet Gynecol 1983; 61:113-114. dad pélvica inflamatoria. En: Infectologia Perinatal.
7. Pastorek II JG. Pelvic Inflammatory disease and Editado por E Calderón, JL Arredondo, S
tubo-ovarian abscess. Obstet Gynecol Clin North Karchmer, E Nasrallah. 1a edición. Editorial Tri-
Am 1989; 16:347-361. llas, México 1991.

879
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VII

Hipertensión arterial asociada con el embarazo

Alejandro Bautista, MD
Profesor Asociado de Gineco-Obstetricia
Universidad Nacional de Colombia.
Jefe Servicio de Totémicas,
Instituto Materno Infantil.
Bogotá

L os trastornos hipertensivos asociados al


embarazo son muy frecuentes durante el
control prenatal. En nuestro medio es una en-
desaparición del escenario clínico. Su frecuen-
cia se dispara en casos de madres solteras,
embarazos no deseados, desempleados y
tidad endémica presente hasta en 10% de los desplazados, toda ésta una problemática muy
embarazos. En la práctica diaria esta prevalen- nuestra. Sin embargo, el pronóstico es sus-
cia tan importante se acompaña de gran mor- ceptible de modularse mejorando el diagnós-
bilidad y mortalidad materna y perinatal. La tico temprano.
primera causa de muerte materna en nuestro
país está relacionada con la toxemia gravídica.
La entidad obstétrica más relacionada con es- CLASIFICACIÓN
tos casos letales es la eclampsia, acompaña-
da o agravada por el Síndrome HELLP. Debido a la cantidad de clasificaciones utiliza-
das en la literatura mundial para agrupar los
La manifestación hipertensiva más frecuente- trastornos hipertensivos asociados con el em-
mente encontrada durante el embarazo es la barazo, es conveniente escoger la más sen-
preeclampsia. Esta entidad aparece en gesta- cilla y práctica, la del Colegio Americano de
ciones menores de 34 semanas en 35% de Ginecólogos y Obstetras (1972).
los casos. Cuando se encuentra la asociación
de preeclampsia y prematurez se conjuga el
determinante clínico de 30% de las muertes PREECLAMPSIA - ECLAMPSIA
perinatales en nuestro medio. Es así como la
preeclampsia es la segunda causa de muerte Preeclampsia: cuadro clínico propio del em-
perinatal. barazo que aparece después de la semana
24 y se caracteriza por la presencia de hiper-
A nivel mundial se ha intentado controlar de tensión arterial acompañada de proteinuria o
manera preventiva la aparición de los cuadros de edemas patológicos. Este síndrome ante-
clínicos severos relacionados a la hipertensión cede al desarrollo de la eclampsia.
arterial durante la gestación sin lograr el éxito
esperado. Estas entidades están muy relacio- Eclampsia: cuadro clínico que se caracteriza
nadas con las condiciones socioeconómicas por la aparición de un síndrome convulsivo
de la población, lo cual hace imposible su generalizado y complejo durante la segunda

880
CAPÍTULO VII: HIPERTENSIÓN ARTERIAL ASOCIADA CON EL EMBARAZO

mitad del embarazo o las primeras 48 horas horas para confirmar su presencia. El otro cri-
del puerperio, en una paciente con signos de terio que se tiene en cuenta es la elevación
preeclampsia. durante el control prenatal en las cifras diastó-
licas por encima de 25 mmHg.

Hipertensión crónica Edemas patológicos: edemas de predominio


matutino, localizados principalmente en sitios
Es la presencia de hipertensión arterial detec- no declives (párpados, pared abdominal, asci-
tada antes de la semana 20 del embarazo, o tis), que no desaparecen con el reposo y que
detectada en la segunda mitad de la gestación se acompañan de ganancia ponderal exage-
pero que persiste después de la sexta semana rada (mayor de 800 g en una semana).
posparto.
Proteinuria: eliminación urinaria de proteínas
mayor de 300 mg en orina de 24 horas o ma-
Hipertensión crónica yor de 30mg/dL en muestra aislada (valor equi-
con preeclampsia sobreagregada valente a +).

Cuando el cuadro clínico anterior se acompa- Obesidad: índice de masa corporal mayor de
ña de aumento de las cifras tensionales o apa- 26. (Peso/Talla al cuadrado).
rición de anasarca o proteinuria. El criterio fun-
damental para precisar este diagnóstico es el Presión arterial media (PAM): presión diastó-
aumento de las cifras tensionales en 30 mmHg lica más un tercio de la presión de pulso
en la sistólica y 15 mmHg en la diastólica. (Sistólica-Diastólica). PAM= PD+1/3(PS-PD).

Prueba de Gant (Roll Over Test): consiste en


Hipertensión transitoria tomar la tensión arterial en decúbito lateral
izquierdo y repetir el procedimiento cinco mi-
Hipertensión arterial que aparece después de nutos después de adoptar el decúbito supino.
la semana 36, o durante el trabajo de parto o La prueba es positiva si aumenta en 20 mmHg
durante las primeras 24 horas del puerperio y la presión arterial diastólica. Se realiza durante
desaparece antes del décimo día del puerpe- el tercer trimestre del embarazo.
rio. No se acompaña de proteinuria. General-
mente no se acompaña de ninguna repercu- Síndrome HELLP: diagnóstico clínico que se
sión sobre la unidad feto-placentaria. realiza en un grupo de pacientes con pre-
eclampsia–eclampsia que manifiestan seve-
ro compromiso hepático y hematológico. Se
GLOSARIO caracteriza por la presencia de aminotrans-
ferasas elevadas, criterios de hemólisis y trom-
Hipertensión arterial: aumento anormal de la bocitopenia.
tensión arterial durante el embarazo. La pre-
sencia de este signo clínico depende de en-
contrar una tensión arterial sistólica mayor o ATENCIÓN PRENATAL BÁSICA
igual a 140 mmHg o una tensión arterial dias-
tólica mayor o igual de 90 mmHg. Estas cifras Las pacientes con mayores factores de ries-
anormales deben ser en las siguientes seis go de presentar preeclampsia son las primi-

881
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

gestantes o multigestantes con primipaterni- tificar la presión arterial media, con la pa-
dad. Estas pacientes sin antecedentes médi- ciente sentada. Si es mayor de 85 mmHg,
cos pregestacionales presentan cuadros clíni- considerar la prueba como positiva.
cos de preeclampsia pura. Sin embargo, la • Recomendar periodos de reposo mínimo
preeclampsia es patrimonio obstétrico de un de dos horas durante el día y ocho horas
porcentaje importante de pacientes con tras- nocturnas desde la semana 24.
tornos médicos pregestacionales, las cuales • Suplementos nutricionales de ácido fólico
desarrollan cuadros clínicos de preeclampsia (1mg diario) y calcio (1,2 g diarios) durante
sobreagregada. todo el embarazo.
• Control prenatal por médico general que
La preeclampsia es más probable en las pa- debe remitir a especialista en caso del pri-
cientes con los siguientes antecedentes: mer indicio patológico.
• Actualmente se ha otorgado gran importan-
• Primigestantes adolescentes (menores de cia a la administración gestacional de antio-
16 años) 14%. xidantes y grasas poliinsaturadas para pre-
• Primigestantes mayores (mayores de 35 venir preeclampsia. Los esquemas con an-
años) 35%. tioxidantes que han demostrado beneficio
• Multigestantes con primipaternidad 24%. utilizan 400 U de vitamina E y 1 g de vita-
• Primigestantes de cualquier edad con an- mina C.
tecedentes familiares de preeclampsia, en
las hermanas o la madre 24-38%.
• Embarazo múltiple 35%. MANEJO HOSPITALARIO
• Molas gigantes (nivel uterino supraumbi-
lical) 80%. PREECLAMPSIA

Cuando se conjugan estos parámetros con al- Diagnóstico


to riesgo psicosocial, el cual probablemente Se confirma el diagnóstico cuando se encuen-
en nuestro medio oscila alrededor de 18% de tran los criterios clínicos en pacientes con fac-
los embarazos, se selecciona un grupo de ges- tores de riesgo epidemiológicos. Ochenta por
tantes donde se deben realizar las siguientes ciento de las pacientes con preeclampsia con-
medidas durante el control prenatal: jugan estos dos elementos:

• Cuantificar el ácido úrico en la primera con- • Criterios Epidemiológicos:


sulta prenatal o periconcepcional, para - Primigestante adolescente o mayor.
asignar valor patológico a cualquier eleva- - Nuevo compañero sexual.
ción mayor de 30% que aparezca durante - Antecedente personal de preeclampsia.
el tercer trimestre. - Antecedente familiar de preeclampsia.
• Comparar las cifras de hemoglobina y he- - Obesidad.
matocrito de la primera mitad del embarazo - Embarazo múltiple.
con las cifras del tercer trimestre, para vigi- - Hipertensión crónica.
lar un descenso fisiológico de estos valores - Vasculitis autoinmune.
hasta en 17%. Si esto no se presenta, pro- - Hipotiroidismo.
bablemente exista hemoconcentración. - Migraña clásica.
• Realizar prueba de Gant (o Roll Over Test) - Prolapso de la válvula mitral.
entre la semana 28-32. Si es positiva, cuan- - Neurofibromatosis.

882
CAPÍTULO VII: HIPERTENSIÓN ARTERIAL ASOCIADA CON EL EMBARAZO

- Hidrops fetal. • Hipocalciuria: calcio urinario en muestra


- Síndrome de anticuerpos antifosfolípidos. aislada menor de 12mg/dL o calcio en ori-
• Criterios Clínicos: aparición de hiperten- na de 24 horas menor de 195 mg.
sión arterial acompañada de proteinuria y/
o edemas patológicos. Orientación clínica
La preeclampsia debe ser contemplada como
Sin embargo, existen pacientes que no pre- un cuadro de Disfunción Orgánica Múltiple
sentan los dos elementos anteriores pero en (DOM). Cuando existen de manera objetiva
quienes clínicamente hay gran sospecha de dos o más órganos comprometidos por la en-
la entidad. En estos casos se confirma el diag- tidad, el riesgo de morbimortalidad se aumenta
nóstico mediante cualquiera de los siguientes de forma ostensible, por lo cual aparece una
criterios bioquímicos: emergencia obstétrica y médica, que muchas
veces debe resolverse con la terminación de
• Hemoconcentración: hematocrito mayor la gestación.
del 38% a nivel del mar.
• Hiperuricemia: ácido úrico mayor de 5,5 La DOM que no recibe un tratamiento enérgi-
mg/dL. co y adecuado puede terminar en falla multisis-
• Hipofiltración glomerular: depuración de témica, la cual amerita manejo en unidad de
creatinina menor de 80 cc/minuto. cuidado intensivo por la alta tasa de mortali-
dad materna.

TABLA 1. COMPROMISO MULTIORGÁNICO DE PREECLAMPSIA-ECLAMPSIA

Órgano Disfunción Falla


Cerebro Irritabilidad Neuronal* Convulsión
Vascular Hipertensión Severa: Colapso Vasomotor
Diastólica Mayor de 110 mmHg
Sistólica Mayor de 160 mmHg
Riñón Oliguria Insuficiencia Aguda**
Proteinuria Nefrótica: Hematuria
+++ ó ++++
3,5 g /24 horas.
Hígado*** Aminotranferasas mayor de 70U/L Falla Hepática*** *
Epigastralgia pertinaz Hematoma subcapsular
Hematológico Trombocitopenia***** CID
Hemólisis******
Placenta RCIU Abruptio
Oligohidramnios Muerte fetal
Cardiopulmonar Disfunción ventricular Edema pulmonar
Embolia amniótica
Páncreas Pancreatitis aguda
Laringe Edema laríngeo
* Sintomas y signos asociados al compromiso del sistema nervioso central: cefalea pulsátil, fosfenos, tinnitus, visión borrosa, hiperreflexia, clonus patelares.
** Usualmente una reducción durante 24 horas en 50% de la filtración glomerular, qué se acompaña de elevación en los nitrogenados o una creatinina sérica
para una embarazada mayor de 1,2 mg /dL.
*** El compromiso hepático acompañado de trastorno hematológico se denomina síndrome HELLP.
**** La falla hepática se diagnostica en presencia de hipoglicemia, prolongación del tiempo de protrombina o disminución del factor 5, cuando esto se
encuentra en el curso clínico de la preeclampsia debe sospecharse la presencia de un Hígado graso Agudo del embarazo.
***** Recuento plaquetario menor de 150.000/mL.
****** La presencia de hemólisis se determina por la aparición de hiperbilirrubinemia indirecta, fragmentos anormales de eritrocitos en el frotis de sangre
periférico, elevación de la deshidrogenasa láctica, alteración de la haptoglobina circulante o hemoglobina libre en el plasma.

883
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO Entre las semanas 26-34, la terminación del


embarazo debe decidirse por un grupo multi-
No existe una medida terapéutica mágica que disciplinario con experiencia en el área, de
revierta la evolución del síndrome preeclámp- acuerdo con el recurso humano disponible.
tico. El principal objetivo terapéutico es encon-
trar el momento oportuno para terminar el em- Los parámetros a tener en cuenta para esta
barazo. decisión probablemente son: el curso clínico
con tendencia progresiva al empeoramiento
Medidas Generales y/o la presencia de hallazgos patológicos en
• Hospitalización de todas las pacientes con la vigilancia fetal. En pacientes en quienes se
diagnóstico de preeclampsia. decide manejo expectante ameritan vigilancia
• Durante las primeras 24 horas de hospita- hemodinámica estrecha mediante radiografía
lización calificar el compromiso materno y de tórax y gases arteriales y monitoría de la
fetal, para clasificar la entidad. Además pre- presencia de coagulopatia subclínica larvada.
cisar la edad gestacional, estabilizar las va-
riables hemodinámicas y en muchas oca- La mayor emergencia materna en preeclamp-
siones terminar el embarazo. sia es el hallazgo de manifestaciones hemorra-
• La paciente hospitalizada debe ser vigila- gíparas en cualquier sitio del organismo, he-
da de la siguiente manera: tensión arterial morragias cerebrales, hemorragias retinianas,
cada 4 horas, proteinuria cualitativa diaria, hemorragia de vías digestivas altas o bajas,
proteinuria cuantitativa semanal, control sangrado hepático, sangrado del lecho placen-
diario de peso, balance de líquidos adminis- tario, hematuria. En estos casos debe reser-
trados y eliminados. Además, solicitar los varse sangre fresca o plasma y terminar el
siguientes exámenes: hemoglobina, hema- embarazo lo más pronto posible. La cesárea
tocrito, recuento de plaquetas, transamina- es urgente.
sas, bilirrubinas, ácido úrico, BUN, creati-
nina, deshidrogensa láctica, frotis de san- Esta contraindicada la uteroinhibición de la
gre periférica, depuración de creatinina, paciente toxémica.
ecografía obstétrica, perfil biofísico y moni-
toría fetal. Medidas Específicas
• Administrar 24 mg de dexametasona en 24 • Dieta normosódica e hiperproteica.
horas para maduración pulmonar fetal en • Administración sistemática de cristaloides
embarazos entre 26-34 semanas. Están en todas las pacientes con preeclampsia
contraindicados cuando el compromiso fe- severa, para optimizar la perfusión tisular.
tal es significativo. Parámetro indirectamente medido con gas-
• Las indicaciones para terminar el embara- tos urinarios ideales, mayores de 1 ml/kg/
zo son: hora. Generalmente las pacientes ameritan
- Preeclampsia en pacientes con emba- un promedio de 150-200 ml/h de cristaloi-
razos menores de 26 semanas o mayo- des. Las pacientes que requieren un mayor
res de 36 semanas. aporte de líquidos son las oligúricas, pre-
- Pacientes con dos o más órganos dis- via valoración de la función cardiovascular
funcionantes sin interesar la edad gesta- (radiografía de tórax, presión venosa cen-
cional. tral, gases arterio-venosos y oxímetria de
- Pacientes con disfunción de un órgano pulso), las pacientes hemoconcentradas y
en embarazos mayores de 34 semanas. las pacientes con presiones arteriales se-

884
CAPÍTULO VII: HIPERTENSIÓN ARTERIAL ASOCIADA CON EL EMBARAZO

veras y convergentes (predomina la eleva- do la monoterapia en dosis máxima ha fraca-


ción de la diastólica). sado.
• Utilización del sulfato de magnesio terapéu-
tico en todos los casos de preeclampsia con Frente a las pacientes que presentan emer-
disfunción cerebral, inminencia de eclamp- gencia hipertensiva las cifras tensionales de-
sia o eclampsia. Administrar el esquema ben manejarse con fármacos parenterales de
Zuspan, 6 g de bolo de impregnación du- acción rápida como hidralazina (primera elec-
rante 20 minutos, seguido de 1 g/hora, mí- ción, pero de difícil consecución en nuestro
nimo durante 24 horas. Siempre que esté medio), labetalol, nitroprusiato.
indicado el magnesio, utilizarlo mínimo en
las primeras 24 horas de puerperio, ó 24 • Soporte inotrópico: indicado en pacientes
horas después de controlada la sintomato- con signos de disfunción ventricular sistó-
logía neurológica. lica. Debe sospecharse en pacientes con
• Antihipertensivos: utilizar fármacos en taquicardia y ritmo de galope, estertores
aquellas pacientes que después de una basales, cardiomegalía y derrames pleura-
adecuada hidratación, reposo y administra- les, presión venosa central o capilar pul-
ción de magnesio, persistan con cifras de monar elevada, oximetría de pulso menor
presión arterial diastólica mayor de 100 de 90%, oliguria persistente. En estos ca-
mmHg, registradas en decúbito lateral iz- sos se recomiendan la digital y los adrenér-
quierdo. gicos como dopamina, dobutamina o adre-
nalina. Estos pacientes ameritan monitori-
Los medicamentos utilizados se clasifican en zación hemodinámica invasora.
cuatro grupos:

1. Simpaticolíticos de acción central: alfa metil MANEJO PERIPARTO


dopa y clonidina.
2. Calcio antagonistas: nifedipina, nitrendipina La inducción del trabajo de parto con oxitocina
y amliodipino. está indicada en pacientes con embarazos
3. Beta-bloqueadores: labetalol, atenolol, mayores de 34 semanas, cifras tensionales
metoprolol. controladas, sin alteración del sistema nervio-
4. Vasodilatadores periféricos: prazosin. so central, y con puntajes de maduración cer-
vical mayores o iguales a 6/13.
Durante el embarazo están contraindicados
de manera absoluta los inhibidores ECA y de Cuando el cuello es desfavorable y el compro-
manera relativa los diuréticos. Los primeros miso materno no es severo puede utilizarse
se pueden utilizar durante el puerperio. dinoprostona. Si el compromiso materno es
severo se debe estabilizar hemodinámica y
Se recomienda utilizar monoterapia, inician- neurológicamente para terminar el embarazo
do como primera elección con nifedipina (en- entre 6-24 horas, mediante operación cesárea.
tre 40-60 mg día), segunda elección clonidina
o labetalol y tercera elección prazosin. Las indicaciones absolutas de cesárea son:
• Disfunción o falla orgánica con cuello des-
Cuando las cifras tensionales están en rangos favorable.
severos es conveniente utilizar dos medica- • Compromiso fetal severo.
mentos de grupos diferentes; lo mismo cuan- • Sospecha de abruptio de placenta.

885
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Inminencia de ruptura o ruptura de hema- 1. Eclampsia típica: convulsiones tónico-cló-


toma subcapsular hepático. nicas, generalizadas y complejas, autolimi-
• Fetos pre-términos entre 28-34 semanas, tadas por la recuperación del estado de
que son sometidos a cesáreas electivas. conciencia en las siguientes dos horas de
• Todas las indicaciones obstétricas de cesá- la crisis.
rea asociadas a la preeclampsia. 2. Eclampsia atípica: cuadro neurológico que
aparece antes de la semana 24 del emba-
Estas pacientes ameritan vigilancia estrecha razo, o después de 48 horas postparto, sin
durante las primeras 72 horas de puerperio. signos de inminencia previos a la crisis.
Este periodo es crítico por la frecuente apari- 3. Eclampsia complicada: cuando los cuadros
ción de complicaciones: edema pulmonar, clínicos anteriores se acompañan de acci-
eclampsia puerperal, sepsis. dente cerebrovascular, hipertensión endo-
craneana o edema cerebral generalizado.
Las cifras de tensión arterial permanecen ele- Estas pacientes presentan compromiso
vadas durante las primeras seis semanas y neurológico persistente, manifestado por
se deben controlar estrechamente ajustando focalización, estado eclámptico (3 ó más
periódicamente la dosis de los medicamentos. convulsiones), coma prolongado.
En pacientes con proteinuria severa, esta de-
be mejorar ostensiblemente durante las prime- Exámenes paraclínicos: está indicado el estu-
ras cuatro semanas, cuando esto no ocurre dio de imágenes neurodiagnósticas en los ca-
probablemente exista nefropatía asociada. sos de eclampsia complicada y tardía posparto.

Los paraclínicos deben normalizarse en 72 Diagnóstico diferencial


horas. En los cuadros clínicos de eclampsia atípica
debe descartarse la presencia de:

ECLAMPSIA • Hemorragia subaracnoidea.


• Trombosis de senos venosos subdurales.
El cuadro clínico se caracteriza por la apari- • Intoxicación hídrica.
ción de convulsiones, coma o amaurosis sú- • Epilepsia.
bita en pacientes con preeclampsia. • Neurosis conversiva.

CLASIFICACIÓN
TRATAMIENTO
• Anteparto.
• Intraparto. Durante la convulsión colocar la paciente en
• Postparto. decúbito lateral, evitar la mordedura lingual,
• Tardía postparto. aspirar secreciones y administrar oxigeno. In-
mediatamente después iniciar la impregnación
Criterios Diagnósticos con seis gramos de sulfato de magnesio, ad-
Clinicos: de acuerdo con el curso clínico y la ministrados durante 20 minutos.
severidad del compromiso neurológico exis-
ten tres categorías: No es necesario manejar el primer episodio
convulsivo con benzodiazepinas, por el riesgo
de depresión respiratoria materna y neonatal.

886
CAPÍTULO VII: HIPERTENSIÓN ARTERIAL ASOCIADA CON EL EMBARAZO

Durante el postictal el compromiso fetal es LECTURAS RECOMENDADAS


muy importante por el periodo transitorio de
apnea materna. Preferiblemente el feto debe 1. Buchbinder A, Sibai BM, Caritis S, et al.Adverse
ser reanimado in útero. perinatal outcomes are significantly higher in seve-
re gestational hypertension than in mild preeclamp-
sia. Am J Obstet Gynecol 2002; 186:66-71.
Durante el periodo de impregnación con mag-
2. Chappell LC, Seed PT, Briley AL, et al. Effect of
nesio no deben realizarse estímulos doloro- antioxidants on the occurrence of pre-eclampsia
sos como venoclisis, toma de sangre para la- in women at increased risk: a randomised trial.
boratorio, colocación de catéter vesical. Lancet 1999; 354:810-6.
3. Easterling TR, Brateng D, Schmucker B, Brown
Posteriormente se continúa el goteo de man- Z, Millard SP. Prevention of preeclampsia: a ran-
tenimiento de dos gramos por hora de sulfato domized trial of atenolol in hyperdynamic patients
de magnesio, la hidratación con cristaloides, before onset of hypertension. Obstet Gynecol
1999; 93:725-33.
la estabilización de las cifras tensionales y el
4. Goffinet F, Aboulker D, Paris-Llado J, et al.
traslado a una institución de tercer nivel. Screening with a uterine Doppler in low risk preg-
nant women followed by low dose aspirin in women
Después de realizar la reanimación intrauteri- with abnormal results: a multicenter randomised
na es necesario definir el bienestar fetal y des- controlled trial. BJOG. 2001; 108:510-8.
cartar la presencia coincidente de abruptio de 5. Hogg BB, Tamura T, Johnston KE, et al.Second-
placenta, que indicaría la terminación inme- trimester plasma homocysteine levels and preg-
diata del embarazo mediante cesárea. nancy-induced hypertension, preeclampsia, and
intrauterine growth restriction. Am J Obstet Gyne-
col 2000; 183:805-9.
Sin embargo, el momento ideal para terminar 6. Isler CM, Barrilleaux PS, Magann EF, et al A pros-
el embarazo, es posterior a la recuperación pective, randomized trial comparing the efficacy
del estado de conciencia materno, y la esta- of dexamethasone and betamethasone for the
bilización de las cifras tensionales. treatment of antepartum HELLP (hemolysis, ele-
vated liver enzymes, and low platelet count) syn-
Frente a los casos de compromiso neurológico drome. Am J Obstet Gynecol 2001;184:1332-7.
persistente y progresivo probablemente sea 7. Livingston JC, Sibai BM. Chronic hypertension in
pregnancy. Obstet Gynecol Clin North Am 2001;
necesaria la administración coadyuvante de
28:447-63.
un segundo anticonvulsivante como difenilhi- 8. Scardo JA, Vermillion ST, Newman RB, et al. A
dantoína, diazepam, barbitúricos. randomized, double-blind, hemodynamic evalua-
tion of nifedipine and labetalol in preeclamptic hy-
Debe siempre valorarse el compromiso hemo- pertensive emergencies. Am J Obstet Gynecol
dinámico, hematológico, hepático y renal. 1999;181:862-6.
9. Vermillion ST, Scardo JA, Newman RB, et al. A
randomized, double-blind trial of oral nifedipine and
intravenous labetalol in hypertensive emergencies
of pregnancy. Am J Obstet Gynecol 1999; 181:858-
61.
10. Villar J, Ba’aqeel H, Piaggio G, et al. WHO ante-
natal care randomised trial for the evaluation of a
new model of routine antenatal care. Lancet 2001;
357:1551-64.

887
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VIII

Infecciones cervico-vaginales

Jacinto Sánchez, MD
Jefe, Departamento de Obstetricia y Ginecología
Instituto Materno Infantil
Bogotá

L as infecciones cérvico-vaginales se pre-


sentan con una incidencia de 7-20% de
las mujeres por año. Su significado e impor- 3.
tes, en la fase estrogénica; escasas, opa-
cas, gruesas, en la fase lútea.
Las anormalidades que implican la presen-
tancia clínica tienen que ver con implicaciones cia del flujo o leucorrea por cambios en el
de orden social, riesgo de contagio al compa- volumen, consistencia, color, olor, pH y su
ñero sexual y, en el caso de la embarazada, asociación a síntomas (prurito, ardor, dispa-
riesgos para el feto y el recién nacido. reunia, disuria).
4. El reconocimiento de la capacidad de diferen-
Un enfoque adecuado del problema hace in- tes agentes biológicos, incluyendo virus, bac-
dispensable tener presente algunas conside- terias, hongos y protozoarios, para producir
raciones previas con respecto a los siguien- infecciones cervico-vaginales (Tabla No.1).
tes factores: 5. La consideración del flujo como manifes-
1. La existencia de una flora vaginal que in- tación de enfermedad sistémica o como re-
cluye: Bacilos de Döderlein, Streptococcus sultado del efecto de medicamentos.
viridans, Staphylococcus albus, difteroides, 6. El contacto sexual implica la transferencia
hongos y bacterias anaerobias en propor- de secreciones genitales y, con frecuencia,
ción de 5:1 con respecto a las aerobias. El el intercambio de microorganismos.
mayor porcentaje corresponde al bacilo de
Döderlein, responsable de la conservación Se reconoce la vaginosis bacteriana, un térmi-
de la acidez vaginal (pH normal entre 3,8 y no, con la terminación osis que indica que no
4,2). La flora vaginal normal, productora de hay, o que es mínima, la inflamación vaginal.
H2O2, interactúa para mantener la acidez y La vaginosis bactetriana afecta principalmen-
genera bacteriocinas que inhiben el creci- te a mujeres jóvenes sexualmente activas,
miento de otros microoorganismos. pero puede aparecer en ausencia de coito co-
2. La presencia de secreciones normales, ori- mo resultado de un cambio masivo de la flora
ginadas principalmente a partir del cérvix y vaginal, con disminución de los lactobacilos
del trasudado vaginal, constituidas por productores de H2O2 e incremento de los anae-
agua, moco, células exfoliadas, leucocitos, robios y pH >4,5. La paciente puede ser asinto-
hematíes y bacterias, suelen ser escasas, mática o manifestar flujo copioso, delgado con
mucoides, sin olor, no asociadas con pruri- olor a pescado. El tratamiento se hace con
to, ardor u otros síntomas, con caracterís- antibióticos tópicos en forma de óvulos (clinda-
ticas determinadas por la etapa del ciclo. micina o metronidazol), que pueden ser refor-
Son más abundantes, transparentes, filan- zados por vía oral.

888
CAPÍTULO VIII: INFECCIONES CERVICO-VAGINALES

TABLA No. 1.

AGENTES BIOLÓGICOS RESPONSABLES DE LAS INFECCIONES CERVICO-VAGINALES

• Hongos: Candida albicans


• Protozoarios: Trichomonas
• Bacterias:
- Neisseria gonorrhoeae
- Gardnerella vaginalis
- Otros (enterobacterias, Chlamydia)
• Virus: Virus del herpes simple (herpes virus)
• Flujo asociado a cuerpos extraños
• Vaginitis de contacto

FLUJO POR HONGOS TRATAMIENTO

El agente etiológico es la Candida albicans o Los medicamentos especialmente activos son


monilia, hongo levaduriforme de la familia los imidazoles, miconazol, clotrimazol (o tolfa-
cryptococacea que incluye los géneros Can- natato) y la nistatina, un antibiótico poliénico.
dida, Torulopsis, Trichosporum, Criptococcus. Se prescriben en forma de óvulos o crema
Es un patógeno oportunista, componente de para su aplicación durante 7 días.
la flora vaginal normal en un cierto número de
mujeres y de la flora del tubo digestivo, su Se puede asociar, excepto en embarazadas,
principal reservorio. con la forma oral del ketoconazol, 2 tabletas
diarias durante 5 días. El compañero sexual
debe ser tratado en forma oral y local. Han
SÍNTOMAS sido ampliamente documentados casos de ba-
lanitis, balanoprostitis y uretritis en el hombre,
El motivo de consulta suele ser prurito vulvo-
afecciones que se constituyen en factor de
vaginal intenso. Hay eritema vulvar y excoria-
reinfección para la mujer.
ciones por rascado.
Se recomienda la abstinencia sexual durante
A la especuloscopia el flujo es de color blan-
el tratamiento y la no aplicación del medica-
co, grumosos, sin olor, en “copos” o natas
mento durante la menstruación.
adheridas a la mucosa del cuello y la vagina,
que dejan pequeñas superficies sangrantes
al ser desprendidas. Se asocia con eritema
ASPECTOS EPIDEMIOLÓGICOS
vaginal. El pH se encuentra entre 5 y 7.
La Candida albicans se encuentra frecuente-
mente en pacientes diabéticas, en mujeres
DIAGNÓSTICO MICROSCÓPICO
que han recibido antibióticos de amplio espec-
En la preparación en fresco o en la colabora- tro o corticoides y en una tercera parte de las
ción Gram se evidencian las estructuras lava- embarazadas normales, con el riesgo en este
duriformes, células esféricas u ovoides, o las último grupo de que ocurra moniliasis oral en
hifas, o micelios. el recién nacido.

889
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En casos de falta de respuesta al tratamiento dulante y axostilo, con tamaño un poco ma-
debe recordarse la posibilidad de infecciones yor al de un leucocito, de 15-30 micras, de
mixtas, por lo cual se deberá recurrir al labo- movimientos rápidos y bruscos característicos.
ratorio para realizar los estudios pertinentes.

TRATAMIENTO
FLUJO POR TRICHOMONAS
El metronidazol agente terapéutico específi-
Esta enfermedad de transmisión sexual tiene co. Se administra en un esquema combinado
una incidencia del 3%. El agente es un proto- oral y local: 1 tableta de 250 mg 3 veces al
zoario unicelular flagelado, anaerobio facul- día durante 7-10 días y un óvulo diario por el
tativo, del género Trichomonas, que incluye mismo tiempo. También se ha propuesto el
las especies buccalis o tenax, hominis y vagi- tratamiento con dosis única de 2 g de metroni-
nalis que residen, respectivamente, en la boca, dazol, o sus derivados tinidazol, secnidazol.
tubo digestivo y vagina del ser humano; esta
última es la única especie patógena y sólo En la mujer embarazada sólo está permitido
existe en forma de trofozoito. el tratamiento local con clotrimazol.

SÍNTOMAS RECOMENDACIONES
Y ASPECTOS EPIDEMIOLÓGICOS
En un poco más del 10% de las mujeres afec-
tadas no suele haber síntomas ni alteraciones. Debe tratarse al compañero sexual con el mis-
En el resto hay prurito vaginal de grado mo- mo esquema oral, advirtiendo sobre la impor-
derado a intenso, dispareunia y ocasional- tancia de no consumir alcohol durante el trata-
mente disuria. El protozoario se localiza prin- miento por los efectos secundarios que se
cipalmente en la vagina, la uretra y las glán- pueden presentar (náuseas, vómito).
dulas parauretrales.
En el hombre el parásito se localiza en las
El flujo es abundante, de color amarillo-ver- glándulas parauretrales y ocasionalmente en
doso, mal oliente, con un pH de 5-7,5. Las la próstata, vesículas seminales y epidídimo.
lesiones varían según la fase evolutiva de la
infección: la mucosa cervico-vaginal se pre-
senta congestiva, eritematosa, con lesiones INFECCIÓN POR GONOCOCO
petequiales similares a “picaduras de pulga”
o con zonas de “parches” hemorrágicos, con Es una enfermedad de transmisión sexual,
“aspecto de fresa” o con la apariencia granulo- aunque en los niños se aceptan otros mecanis-
matosa en las fases más tardías. mos de infección por el uso común de toallas,
ropa interior, saunas y otros, cuyo agente es
la Neisseria gonorrhoeae.
DIAGNÓSTICO MICROSCÓPICO

Mediante la preparación en fresco se obser- PRESENTACIÓN CLÍNICA


va el parásito de forma piriforme u ovoide, En el hombre los síntomas iniciales aparecen
flagelado, con núcleo anterior, membrana on- 3-5 días después de la exposición: la clásica

890
CAPÍTULO VIII: INFECCIONES CERVICO-VAGINALES

uretritis gonocócica, que se manifiesta por di- DIAGNÓSTICO MICROBIOLÓGICO


suria y secreción uretral purulenta. El parási-
to puede alojarse en la próstata y en el epidí- Inicialmente, mediante la coloración de Gram,
dimo; sin tratamiento puede producir cambios se evidencian los diplococos gramnegativos.
fibróticos y estenosis uretral. Después se obtendrá el resultado de los
cultivos.
En las mujeres, de las cuales el 30-60% pue-
den permanecer asintomáticas, el intervalo
entre infección y enfermedad, es de días a TRATAMIENTO
meses. Las zonas susceptibles expuestas son
la uretra, las glándulas parauretrales y el cér- Siempre se deben considerar, como primera
vix, con síntomas mínimos en el caso de las posibilidad, los esquemas de dosis única. No
dos primeras, de disuria y polaquiuria, que lle- debe olvidarse la asociación, cada vez más
van a confundir con infección de las vías urina- elevada, con Chlamydia.
rias bajas y aparición de flujo en el caso de
estar afectado el endocérvix. Puede haber Los esquemas avalados por los Centros de
compromiso de las glándulas de Bartholin con Control de Enfermedades Infecciosas (CDC)
formación de abscesos. de los Estados Unidos son los siguientes:

El flujo es purulento, fétido, abundante y pro- • Penicilina G procaínica acuosa: 4,8 millo-
duce irritación perineal y proctitis. nes de unidades IM, la mitad en cada glúteo.
• Ampicilina: 3,5 g por vía oral.
Días a meses después del contacto pueden • Amoxicilina: 3 g por vía oral
aparecer hasta en el 40% de las mujeres, ma-
nifestaciones de endometritis, salpingitis o pe- Cualquiera de estos tres antibióticos se acom-
ritonitis, con secuelas de infertilidad hasta en paña de 1 g de probenecid oral, más clorhidra-
20% de los casos. to de tetraciclina cápsulas x 500 mg, 4 veces
al día, o doxiciclina x 100 mg, 2 veces al día
Por otra parte, el germen puede producir la durante 7 días.
llamada perihepatitis gonocócica o síndrome
de Fitz-Hung-Curtis, que puede dar lugar a En pacientes alérgicas a las penicilinas: es-
confusión con cuadros de colecistitis y cuya pectinomicina, 4 g IM (2 g en cada glúteo).
frecuencia real no se conoce.
En pacientes embarazadas, penicilina pro-
En las embarazadas con endocervicitis gono- caínica, ampicilina o amoxicilina, en dosis
cócica se ha descrito la corioamnionitis, enfer- iguales. Las pacientes alérgicas a las penicili-
medad que implica riesgo de oftalmía en el nas deben tratarse con eritromicina etilsucci-
recién nacido con la posibilidad de pérdida de nato, 500 mg por vía vía oral 4 veces al día
la visión. La frecuencia de esta afección era durante 7 días.
del 12% antes de la generalización del méto-
do de Credé (originalmente instilación en los
SEGUIMIENTO
ojos del recién nacido de gotas de nitrato de
plata; en la actualidad se aplican sulfas o anti- Deben efectuarse cultivos de muestras de los
bióticos). sitios infectados 4-7 días después del trata-
miento, incluyendo el recto.

891
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En toda embarazada se debe realizar, como 7 días. Como toda enfermedad de transmisión
parte integral del cuidado prenatal, una toma sexual, el tratamiento debe incluir al cónyuge.
de muestra endocervical para cultivo de Nei-
sseria gonorrhoeae en su primera visita y un
segundo cultivo en el tercer trimestre en todas INFECCIÓN POR HERPES GENITAL
aquellas con riesgo de adquirir la infección.
Es una enfermedad viral de transmisión se-
xual, cuya frecuencia real no se conoce. El
FLUJO POR GARDNERELLA agente es el virus del herpes simple, HSV, de
la familia Herpeviridae que incluye el citome-
En la opinión de muchos investigadores, se galovirus, el virus de Epstein-Barr o de la mo-
trata de una vaginitis de transmisión sexual, nocucleosis infecciosa y el virus de la varice-
con una frecuencia de 50-80%. En nuestro la-zoster, que tienen en común poseer una
medio, según un estudio realizado en la Clíni- doble cadena de ADN.
ca de la Caja Nacional de Previsión de Bogo-
tá, esta frecuencia sería del 27%. Existen dos variantes inmunológicas: HSV1 y
HSV2; dos terceras partes de los casos son
El agente es la Gardnerella vaginalis, antes debidos al HSV2.
conocida como Hemophilus vaginalis y Co-
rynebacterium vaginalis. El flujo es de volumen El mecanismo de transmisión es el contacto
variable, color blanco-grisáceo, acuoso de olor directo de persona a persona. El ser humano
rancio, a pescado, se esparce por la zona es el único huésped y la única fuente natural
vulvar, que se torna muy sensible, dejando en conocida. Lo pueden transmitir tanto las per-
la paciente la sensación de humedad. sonas sintomáticas como las asintomáticas.

Hay dos formas de presentación clínica: la in-


DIAGNÓSTICO MICROSCÓPICO fección primaria y los brotes recurrentes. La
primera aparece con lesiones en la vulva, la
Se realiza mediante la preparación en fresco vagina o el cuello, o en las tres zonas al mis-
por la observación de las llamadas células mo tiempo y manifestaciones generales, refle-
“clave” o “guía”, que son células epiteliales jo de la viremia, como cefalea, fiebre y males-
descamadas con cúmulos de los bacilos ad- tar general; dichas lesiones se manifiestan de
heridos a la superficie. 3-6 días después del contacto, en forma de
vesículas múltiples, de halo eritematoso, casi
siempre precedidas de parestesias en mus-
TRATAMIENTO los, zonas glúteas y abdomen inferior, segui-
do de dolor intenso. Las vesículas se rompen
Metronidazol, 3 tabletas x 250 mg durante 7 dejando ulceraciones que pueden acompañar-
días, complementado con óvulos, 1 diario por se de edema vulvoperineal y adenopatía in-
igual tiempo. guinal. Las lesiones pueden persistir durante
7-10 días y luego remitir en forma espontánea,
Un esquema alternativo en las embarazadas a menos que se sobreagregue infección bacte-
o en aquellas pacientes en quienes esté con- riana, curando sin dejar cicatrices. Posterior-
traindicado el metronidazol es el de ampicilina, mente el virus se localiza en los ganglios de
4 g diarios, o amoxicilina, 3 g diarios, durante las raíces posteriores sacras y cae en lo que

892
CAPÍTULO VIII: INFECCIONES CERVICO-VAGINALES

se ha llamado un estado de latencia y recidi- mento ningún estudio ha identificado alguna


va, con brotes recurrentes. porción del genoma viral en la dotación gené-
tica de las neoplasias cervicales, por lo cual
HERPES RELACIONADO CON EL EMBARAZO no pasa de ser una muy interesante posibili-
dad.
El herpes muy rara vez provoca anomalías
congénitas. Algunos investigadores han seña- El diagnóstico se estable mediante:
lado que las mujeres que sufren de ataques 1. Identificación clínica de las lesiones en los
de herpes durante el embarazo tienen una po- casos sintomáticos.
sibilidad global de aborto espontáneo aproxi- 2. Detección de las células gigantes multinu-
madamente de 30 a 50%. cleadas con cuerpos de inclusión eosinófi-
los intranucleares, en muestras por raspa-
Es mucho más preocupante la posibilidad de do de la base de las vesículas, mediante
herpes neonatal en mujeres con recidivas con- citología con los métodos de Papanicolau
firmadas o sospechas de herpes genital an- o de Tzanck.
tes del embarazo o durante el mismo. 3. Detección de los antígenos específicos en
las células procedentes de las lesiones por
Durante el parto vaginal el recién nacido que- técnicas inmunofluorescentes.
da expuesto al herpes virus; la probabilidad de 4. Aislamiento de los virus, inoculando mate-
infección es del orden del 30-60%, sobre todo rial de las lesiones (líquido vesicular o ras-
durante la fase activa de un brote primario. La pado) en cultivos celulares de tejidos sen-
probabilidad de infección es menor con episo- sibles o en ratones recién nacidos.
dios recurrentes que afecten regiones locali- 5. Titulación de anticuerpos por neutraliza-
zadas como labios, periné o zonas glúteas. ción, hemaglutinación indirecta o ensayo
inmuno-absorbente ligado a enzima
La infección neonatal lleva aparejada una (ELISA).
mortalidad aproximada de 50-60%. Otro 15-
25% presenta lesión residual del SNC o es- TRATAMIENTO
tigmas oculares.
La idoxuridina, en solución al 30%, para apli-
La protección del recién nacido empieza va- cación en las lesiones cada 4 horas durante
lorando a la embarazada e incluye determi- 5-10 días.
nar la vía del parto más segura para su ma-
dre e hijo: la cesárea si se obtienen cultivos El aciclovir administrado en forma oral en do-
positivos, si hay lesiones activas o pródromos sis de 200 mg, 5 veces al día durante 10 días,
definidos en los 7-10 días antes del parto. disminuye la duración de los síntomas y la di-
seminación del virus. Hay esquemas para uso
En caso de rupturas de membranas, la cesá- parenteral reservados para enfermos hospi-
rea debe practicarse entre 4-6 horas poste- talizados con infección diseminada. Su inocui-
riores a ésta. dad en el embarazo no está suficientemente
documentada, por lo cual no se recomienda
VIRUS DEL HERPES TIPO 2 Y CÁNCER CERVICAL su uso.

Aunque se ha postulado la asociación entre La yodo polivinil-pirrolidona, un compuesto yo-


HSV2 y el carcinoma cervical, hasta el mo- dóforo o portador de yodo, en solución, se uti-

893
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

liza para aplicación dos veces al día durante 5- mujeres y hasta en 4-7% de mujeres con
7 días, con el fin de evitar infección secundaria. displasia cervical.

Cada vez son más numerosas las pruebas de


FLUJO INESPECÍFICO la etiología clamidial de la cervicitis en por-
centajes hasta de 36%.
Es aquel no explicado por gémenes fácilmen-
te identificables; se atribuye a microorganis- Las mujeres con cultivos cervicales positivos
mos piógenos del tipo de las enterobacterias, de C. trachomatis frecuentemente sufren colo-
como Escherichia coli, Proteus o por la aso- nización uretral concomitante y más a menu-
ciación de gérmenes. El diagnóstico se hace do presentan síntomas uretrales tipo disuria y
por exclusión. polaquiuria.

No suele haber síntomas, salvo la presencia En el varón es causa de la tercera o dos terce-
de flujo blanco-amarillento, sin olor, en volu- ras partes de las uretritis postgonocócicas, es
men escaso o moderado, y acompañado a decir, las que aparecen 2-3 semanas después
veces de eritema vaginal. Tradicionalmente se del tratamiento adecuado de una uretritis go-
han indicado medicaciones tópicas: tetracicli- nocócica, explicado por la adquisición simul-
na o nitrofurazona en óvulos o crema, aplica- tánea de la infección clamidial y la gonocócica,
dos una vez al día durante 7 días. pero con la aparición posterior de la primera
por su periodo de incubación más largo.
Mejores resultados se logran con el uso del
metronidazol o sus derivados secnidazol y tini- Se acumulan datos que la señalan como agen-
dazol, el primero en dosis de 500 mg 2 veces te etiológico y como copatógeno en la salpin-
al día durante 7-10 días y los segundos en gitis aguda. En las embarazadas con infección
dosis de 2 g en dosis única. cervico-vaginal por Chlamydia los recién naci-
dos corren el riesgo de sufrir tracoma, conjun-
tivitis de inclusión y neumonía.
FLUJO POR CHLAMYDIA
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
Incluido en la categoría del flujo inespecífico,
porque a diferencia de los varones (quienes El diagnóstico de infección por Chlamydia se
sufren uretritis no gonocócica o postgonocó- establece en la mujer mediante: cultivos en
cica), el flujo en las mujeres con infección cer- células de McCoy irradiadas y técnicas de re-
vicovaginal por Chlamydia no presenta carac- acción de fijación del complemento y de inmu-
terísticas específicas. El agente causal es la nofluorescencia.
Chlamydia trachomatis.
Debido a los problemas prácticos que plan-
tea el diagnóstico, se recomienda el tratamien-
Las cepas que infectan al ser humano pue-
to con los antibióticos apropiados en el caso
den diferenciarse en cepas del linfogranuloma
de flujos inespecíficos rebeldes a tratamien-
venéreo (LGV) y los agentes de la conjuntivi-
tos bien realizados.
tis de inclusión.
Estos antibióticos son: tetraciclina 500 mg c/6
Se ha encontrado asociada hasta en el 62% horas durante 7-10 días; doxiciclina cápsulas
de infecciones por Neisseria gonorrhoeae en 100 mg c/12 horas durante 10-14 días.

894
CAPÍTULO VIII: INFECCIONES CERVICO-VAGINALES

En caso de intolerancia a las tetraciclinas o FACTORES QUÍMICOS VERSUS


en mujeres embarazadas se usa eritromicina VAGINITIS POR CONTACTO
etilsuccinato 500 mg oral cada 6 horas duran-
te 7 días. Debe tratarse al compañero sexual. El uso de sustancias irritantes puede desenca-
denar respuesta inflamatoria de la mucosa cér-
vico-vaginal, con infección secundaria por
FLUJO POR CUERPOS EXTRAÑOS hongos o bacterias, muchos de éstos conte-
nidos en los productos anticonceptivos o es-
El flujo asociado con la presencia de cuerpos permicidas caseros, como soluciones de vina-
extraños es una complicación infecciosa, ge- gre, limón, agua jabonosa o preparados co-
neralmente superficial y limitada a la vagina y merciales.
de origen bacteriano. Suele ser abundante,
purulento, fétido y en ocasiones hemorrágico, El tratamiento se dirige a la supresión del uso
acompañado de hiperemia y edema de la mu- de este tipo de sustancias y a la aplicación de
cosa vaginal. Estas características están da- antimicóticos o antibióticos locales.
das en mayor a menor grado por la naturaleza
del cuerpo extraño y el factor de roce y lace-
ración. El tratamiento consiste en la extracción LECTURAS RECOMENDADAS
del cuerpo extraño y la aplicación de antibióti-
cos tópicos: tetraciclina o nitrofurazona óvulos 1. Cram LF, Zapata MI, Toy EC, et al. Genitourinary
o crema, aplicado 1 vez al día durante 7 días. infections and their association with preterm la-
bor. Am Fam Physician 2002; 65:241-248.
2. Lurie S, Woliovitch I, Rotmensch S, et al. Value of
Los elementos más frecuentemente implica-
vaginal culture in management of acute vaginitis.
dos son: Arch Gynecol Obstet 2001; 265:187-189.
1. Dispositivos intrauterinos. 3. Moodley P, Wilkinson D, Connolly C, et al.
2. Tampones olvidados. Trichomonas vaginalis is associated with pelvic
3. Partes de preservativos. inflammatory disease in women infected with
4. Elementos de estimulación sexual de dife- human immunodeficiency virus. Clin Infect Dis
rente naturaleza. 2002; 34:519-522.
4. Mou SM. Vulvovaginitis. En: Conn´s Current
Therapy 2003. Editado por RE Rakel, ET Bope.
Saunders. Philadelphia, 2003.
5. Sobel JD, Nyirjesy P, Brown W. Tinidazole therapy
for metronidazole-resistant vaginal trichomoniasis.
Clin Infect Dis 2001; 33:1341-1346.

895
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IX

Embarazo ectópico

Ariel Iván Ruiz Parra, MD


Profesor Asociado
Departamento de Obstetricia y Ginecología
Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia.
Instituto Materno Infantil.
Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l embarazo ectópico es la implantación de


un óvulo fecundado en un sitio diferente
al endometrio de la cavidad uterina normal.
daria de un aborto tubárico. El embarazo cer-
vical es la implantación del huevo en el
endocérvix.
La localización más frecuente ocurre a nivel
tubárico; también se presenta a nivel cervi-
cal, intersticial, ovárico, en el epiplón, en vís- EPIDEMIOLOGÍA
ceras abdominales y en astas uterinas rudi-
mentarias. La prevalencia de embarazo ectópico es de
alrededor de 3-12 por 1.000 nacidos vivos. En
El embarazo ectópico tubárico comprende 95- los Estados Unidos la incidencia de embara-
98% de los casos; de acuerdo con su sitio de zo ectópico aumentó de 4,5 por 1.000 emba-
implantación puede ser: razos informados en 1970 a 19,7 por 1.000
en 1992. Constituye el 2% de los embarazos
1. Ampular: ocurre en 85% de los casos. En informados. Profamilia informa una tasa de 15
esta localización puede evolucionar hacia por 1.000 embarazos en Colombia.
la resolución espontánea por aborto tubá-
rico o permitir el crecimiento del embrión,
lo que ocasiona ruptura de la trompa. FISIOPATOLOGÍA
2. Istmico: constituye el 13% de los casos. Por
estar localizado en la porción más estrecha El embarazo ectópico después de una ovula-
de la trompa ocasiona rupturas más tem- ción y fertilización naturales se asocia con fac-
pranas. tores de riesgo que lesionan la trompa y alte-
3. Intersticial o intramural: constituye el 2% ran el transporte del embrión tales como la
de los casos. cirugía tubárica previa (incluyendo la esterili-
zación), la salpingitis, el embarazo ectópico
El embarazo ovárico es excepcional. Se dis- previo (como resultado del tratamiento quirúr-
cute la ocurrencia del embarazo abdominal pri- gico o por persistencia del factor de riesgo ori-
mario, pero se acepta la implantación secun- ginal), la endometriosis, las anormalidades

896
CAPÍTULO IX: EMBARAZO ECTÓPICO

congénitas de las trompas y las adherencias embarazo intrauterino que la implantación


secundarias a intervenciones quirúrgicas extrauterina. Aunque la fertilización in vitro y
sobre el útero, el ovario y otros órganos pélvi- la inducción de la ovulación constituyen facto-
cos o abdominales. res de riesgo importantes, se ha encontrado
que los factores tubáricos (salpingitis o ectó-
Cuando ocurre un embarazo en una usuaria pico previos y cirugía) son los factores de ries-
del dispositivo intrauterino hay una probabili- go más importantes para embarazo ectópico
dad mayor de que sea ectópico debido a que después de fertilización in vitro. Los factores
el dispositivo previene más efectivamente el de riesgo se encuentran en la Tabla No. 1.

TABLA No. 1. FACTORES DE RIESGO PARA EMBARAZO ECTÓPICO*

FACTORES DE RIESGO Odds ratio (razón de disparidad)


ALTO RIESGO
Cirugía tubárica 21,0
Esterilización 9,3
Embarazo ectópico previo 8,3
Exposición intrauterina al DES 5,6
Uso del DIU 4,2-45,0
Patología tubárica documentada 3,8-21,0
RIESGO MODERADO
Infertilidad 2,5-21,0
Infecciones genitales previas 2,5-3,7
Múltiples compañeros sexuales 2,1
LIGERO AUMENTO DEL RIESGO
Cirugía pélvica o abdominal previa 0,9-3,8
Fumar cigarrillo 2,3-2,5
Ducha vaginal 1,1-3,1
Edad temprana de la primera relación sexual (<18 años) 1,6
* Según Pisarska MD, Carson SA, Buster JE. Lancet 1998; 351: 1115-20.

CUADRO CLÍNICO
Y AYUDAS DIAGNÓSTICAS
De acuerdo con la evolución, pueden presen- 3. Hemorragia del primer trimestre de la ges-
tarse cuatro cuadros clínicos: tación.
4. Masa pélvica.
EMBARAZO ECTÓPICO NO ROTO
O EN EVOLUCIÓN El diagnóstico diferencial del embarazo ectó-
pico no roto se debe hacer con:
Los hallazgos más comunes son:
1. Dolor pélvico o abdominal. a. Enfermedad pélvica inflamatoria (EPI); en
2. Amenorrea o modificaciones de la mens- este caso hay fiebre, dolor bilateral a la pal-
truación. pación de los anexos y antecedente de leu-

897
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

correa o infección cervicovaginal. Los fac- ocurre un descenso de por lo menos 15%
tores de riesgo asociados con EPI son: an- de la hormona en 8-12 horas, debe consi-
tecedente de EPI, infecciones de transmi- derarse el embarazo ectópico.
sión sexual, múltiples compañeros sexua- b. Ecografía transvaginal. Detecta gestacio-
les, menstruación u aborto inducido recien- nes intrauterinas desde las 5-6 semanas
tes, uso del DIU y trauma genital. de gestación y cuando la concentración de
b. Apendicitis: los hallazgos más comunes βHCG es 1.500 mUI/mL. El saco vitelino
son dolor en fosa ilíaca derecha, fiebre y se puede identificar a las tres semanas pos-
síntomas gastrointestinales. En ambos ca- concepción (cinco semanas desde la últi-
sos el cuadro hemático orienta el diagnós- ma menstruación) y los movimientos car-
tico hacia un proceso infeccioso con leuco- diacos embrionarios desde las tres y media
citosis, neutrofilia y aumento de la veloci- a cuatro semanas posconcepción (5 1/2 a
dad de sedimentación globular. 6 semanas desde la última menstruación).
c. Otros diagnósticos que deben considerar- Con excepción del embarazo heterotópico,
se son: cuerpo lúteo persistente, ruptura la identificación por ultrasonido de un emba-
del cuerpo lúteo, quiste ovárico funcional, razo intrauterino descarta la posibilidad de
volvulus de la trompa, litiasis o infección embarazo ectópico. La detección por ultra-
renal y amenaza de aborto. sonido transvaginal de una masa anexial,
combinada con una concentración de βHCG
En 50% de los casos se puede llegar a esta- de 1.000 mUI/mL tiene una sensibilidad de
blecer un diagnóstico con base en los hallaz- 97%, una especificidad de 99% y unos valo-
gos clínicos; en los demás casos es necesa- res predictivos positivo y negativo de 98%
rio apoyarse en exámenes paraclínicos. para diagnosticar embarazo ectópico. Los ha-
llazgos ultrasonográficos mas específicos
a. Dosificación seriada de βHCG. En los ca- son: masa anexial extraovárica, embrión vivo
sos de embarazo intrauterino normal la con- en la trompa, anillo tubárico y masas mixtas
centración de la hormona se duplica aproxi- o sólidas en las trompas. Cuando se realiza
madamente cada 1,4-2,1 días, con un au- ultrasonido transabdominal convencional la
mento mínimo de 66% en dos días. En los ausencia de saco gestacional intrauterino con
embarazos intrauterinos de mal pronóstico concentraciones de βHCG mayores de 6.500
y en los ectópicos no se observa la progre- mUI/mL (zona discriminatoria) se ha relacio-
sión normal de la βHCG. nado con embarazo ectópico.
Las determinaciones seriadas de βHCG c. Progesterona. Una determinación única de
también indican el momento óptimo para la concentración de progesterona puede
realizar un ultrasonido transvaginal. La excluir el embarazo ectópico cuando se en-
ausencia de una gestación intrauterina en cuentra por encima de 25 ng/mL y una con-
el ultrasonido transvaginal con concentra- centración de progesterona <10 ng/mL ge-
ciones de βHCG superiores a 1.500 mUI/ neralmente es incompatible con un emba-
mL es diagnóstica de embarazo ectópico. razo normal. Los valores entre estos dos
Una posible excepción son las gestaciones niveles no son concluyentes. Se ha indica-
múltiples (se ha informado gestaciones do considerar el diagnóstico de embarazo
múltiples normales con concentraciones de ectópico cuando la progesterona sea me-
βHCG >2300 mUI/mL antes de la identifi- nor de 17,5 ng/mL.
cación por ultrasonido transvaginal). Cuan- d. Curetaje uterino. La muestra endometrial
do se ha realizado un legrado uterino si no puede obtenerse por biopsia en el consul-

898
CAPÍTULO IX: EMBARAZO ECTÓPICO

torio o con dilatación y legrado. Se debe cutánea, hipotensión, hipotensión postural, ta-
hacer solamente cuando se diagnostica un quicardia, lipotimias transitorias y el cuadro
embarazo no viable (por ausencia de pro- hemático muestra anemia.
gresión de la βHCG después de 48 horas
o concentración de progesterona menor de EMBARAZO ECTÓPICO ROTO
5 ng/mL). Cuando no se observa saco den-
tro del útero con la ecografía transvaginal El aumento de volumen provoca la ruptura
y la βHCG está aumentando por encima aguda de la trompa lo que ocasiona sangra-
de la zona discriminatoria, usualmente es do hacia la cavidad peritoneal. El cuadro clí-
innecesario el curetaje uterino para confir- nico se caracteriza por dolor intenso en hipo-
mar el embarazo ectópico. gastrio o en fosa ilíaca que se irradia al epi-
Si se encuentran vellosidades coriales en gastrio y al hombro. Se instaura un cuadro de
el material del legrado, el diagnóstico más abdomen agudo acompañado de palidez mu-
probable es el de aborto, aunque existe la cocutánea, hipotensión, taquicardia, lipotimia
posibilidad de embarazo heterotópico. La y shock hipovolémico si la hemorragia es se-
ausencia de vellosidades coriales estable- vera o no se detiene.
ce el diagnóstico de ectópico; una excep-
ción sería el aborto completo. En la exploración vaginal ocurre dolor a la mo-
Las vellosidades coriales se pueden obser- vilización del cuello, a la presión del fondo de
var macroscópicamente con la prueba de saco posterior y a la palpación bimanual, espe-
flotación en solución salina o por examen cialmente del lado correspondiente al ectópico.
microscópico. El estudio histopatológico del Puede o no identificarse engrosamiento o masa
endometrio en los casos de embarazo ectó- anexial. En el ultrasonido se encuentra líquido
pico revela cambios secuenciales que co- libre en cavidad (correspondiente al hemope-
rresponden a un endometrio hipersecretor. ritoneo). El cuadro hemático muestra anemia.
e. Laparoscopia. No solo permite aclarar el
diagnóstico en casos dudosos, sino que EMBARAZO ECTÓPICO ROTO
permite el tratamiento. Y ORGANIZADO

ABORTO TUBÁRICO Ocurre cuando después de la ruptura (o abor-


to) tubárico, cesa espontáneamente la hemo-
En éste caso ocurre sangrado hacia la cavidad rragia y quedan los productos de la concep-
peritoneal a través de la fimbria. El proceso de ción en la cavidad abdominal. Se presenta una
irritación peritoneal acentúa la sintomatología, historia de dolor hipogástrico difuso o localiza-
el dolor se hace más intenso y generalmente do hacia una de las fosas ilíacas, amenorrea
obliga a la consulta de urgencia. A la explora- o irregularidades menstruales recientes, san-
ción vaginal el cuello permanece cerrado y hay grado intermitente escaso y oscuro, acompa-
dolor a la movilización; el útero se encuentra ñado de malestar general, palidez, lipotimia,
reblandecido; puede o no palparse masa ane- tenesmo, escalofríos y en ocasiones febrícu-
xial y hay dolor a la presión del fondo de saco las. La paciente puede referir un episodio tran-
posterior. El hemoperitoneo resultante puede sitorio de dolor agudo de localización pélvica
producir abombamiento del saco de Douglas. o en una fosa ilíaca.

El estado hemodinámico de la paciente em- Al examen clínico se encuentra palidez muco-


pieza a deteriorarse. Aparece palidez muco- cutánea y signos tardíos de hemoperitoneo. En

899
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

el examen ginecológico se encuentra en oca- para el embarazo ectópico. La elección del tra-
siones sangrado escaso de color oscuro, dolor tamiento depende del cuadro clínico, condicio-
a la movilización del cuello, el útero se puede nes de la paciente, hallazgos a la laparoscopia
identificar de tamaño normal y puede palparse o laparotomía, habilidad del cirujano, medio
una masa parauterina dolorosa, irregular, a hospitalario y deseos de un futuro embarazo.
veces crepitante difícil de delimitar. Hay dolor
a la presión del fondo de saco posterior. A. TRATAMIENTO QUIRÚRGICO

Es necesario hacer diagnóstico diferencial con De acuerdo con la revisión de Hajenius y cola-
aborto, aborto infectado, quiste complicado del boradores (Cochrane Review, 2003), con base
ovario, enfermedad pélvica inflamatoria y plas- en la evidencia disponible, el tratamiento de
trón apendicular. La laparoscopia permite pre- elección (para pacientes estables) es la ciru-
cisar el diagnóstico definitivo en casos dudosos. gía laparoscópica. Aunque la cirugía laparos-
cópica conservativa (salpingostomía) fue me-
nos exitosa que la laparotomía para la elimi-
ATENCIÓN PREHOSPITALARIA nación del embarazo tubárico, debido a una
tasa mayor de trofoblasto persistente en la
Se debe considerar el diagnóstico de embara- cirugía laparoscópica, esta técnica parece ser
zo ectópico en toda mujer con factores de ries- factible en virtualmente todas las pacientes y
go o con sangrado en el primer trimestre del se ha demostrado que es segura y menos cos-
embarazo. La paciente debe ser transporta- tosa. Además, el seguimiento a largo plazo
da a hospitales de segundo o tercer nivel de ha demostrado una tasa de embarazos intrau-
atención y debe mantenerse al menos un ac- terinos comparable y una tasa menor de em-
ceso venoso. La administración de analgé- barazos ectópicos posteriores.
sicos puede dificultar el diagnóstico.
La laparotomía es la vía de elección para el
tratamiento quirúrgico del embarazo ectópico
TRATAMIENTO INICIAL roto y en pacientes hemodinámicamente ines-
tables. La laparotomía también está indicada
Las pacientes con inestabilidad hemodinámica cuando el cirujano no tiene el entrenamiento
deben hospitalizarse. Si no se tiene un acce- o carece de los recursos técnicos adecuados
so venoso debe procurarse inmediatamente o cuando la cirugía laparoscópica es técnica-
con catéteres venosos de grueso calibre. Se mente difícil.
deben obtener las muestras de sangre para
cuadro hemático, hemoclasificación y prueba Los procedimientos quirúrgicos por laparosco-
cruzada e iniciar la reanimación hemodiná- pia o por laparotomía pueden ser conserva-
mica con la administración de cristaloides en tivos o radicales. Las siguientes son las opcio-
infusión rápida. Debe vigilarse la diuresis. nes quirúrgicas que se proponen como pautas
de manejo:

TRATAMIENTO EMBARAZO ECTÓPICO NO ROTO


INTERDISCIPLINARIO
1. Con trompa contralateral sana y con pari-
Existen tratamientos médicos (sistémicos o lo- dad satisfecha: salpingectomía, conservan-
cales) y quirúrgicos (radicales o conservativos) do el ovario.

900
CAPÍTULO IX: EMBARAZO ECTÓPICO

2. Con ausencia o patología de la trompa con- EMBARAZO ECTÓPICO


tralateral y deseo de nuevos embarazos, EN ASTA UTERINA CIEGA
emplear diversas técnicas dependiendo de
la localización: Metrectomía cuneiforme del cuerpo uterino
• Embarazo ampular: salpingostomía li- afectado; a veces es necesario practicar histe-
neal para evacuación y hemostasia. En rectomía.
la actualidad se prefiere practicarla por
vía laparoscópica. EMBARAZO ECTÓPICO OVÁRICO
• Embarazo infundibular (localizado en la
parte más externa de la trompa): expre- Ocurre en 1% de los casos y su tratamiento
sión de la trompa o preservar la porción es la resección parcial o total del ovario.
sana de la trompa con miras a plastia
posterior. EMBARAZO ECTÓPICO CERVICAL
• Embarazo ístmico: practicar resección
segmentaria y anastomosis primaria o, La incidencia es muy baja. Puede confundir-
preferiblemente, evacuación por salpin- se con un aborto. El tratamiento es la evacua-
gostomía lineal y posponer anastomo- ción mediante raspado; de no lograrse la eva-
sis. cuación y, sobre todo, una hemostasia ade-
• Embarazo intersticial: requiere extirpa- cuada por vía vaginal puede requerir histe-
ción quirúrgica con sección en cuña de rectomía abdominal total o ligadura de arte-
una porción del miometrio. Reimplantar rias hipogástricas como tratamiento. También
la trompa es difícil y de mal pronóstico, se ha utilizado tratamiento médico con meto-
por lo cual se hace salpingectomía, con- trexate.
servando el ovario.
EMBARAZO ECTÓPICO ABDOMINAL

EMBARAZO TUBÁRICO ROTO El tratamiento es laparotomía y extracción del


feto, lo cual puede no presentar problemas.
El tratamiento de elección es la salpingecto- Cuando la placenta se encuentra insertada en
mía; siempre se debe tratar de conservar el un órgano no vital (epiplón, trompa), no se de-
ovario. La ooforectomía parcial o total solo be intentar desprenderla por el sangrado que
está indicada si el ovario está comprometido. produce y se debe proceder a extirpar el órga-
no con la placenta in situ. Cuando la placenta
está implantada en el colon, el intestino del-
EMBARAZO ECTÓPICO ROTO gado u otro órgano vital, se debe seccionar el
Y ORGANIZADO cordón umbilical lo más próximo a la placenta
y dejarla en el sitio de implantación. Posterior-
Estabilizar la paciente y practicar laparotomía. mente se hace seguimiento con determina-
La intervención depende de los órganos inte- ciones seriadas semanales de βHCG, ante la
resados; usualmente se practica salpingecto- evidencia de persistencia de tejido trofoblás-
mía, pero en ocasiones se requiere salpigoofo- tico activo se debe iniciar tratamiento con
rectomía. metotrexate.

901
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EMBARAZO HETEROTÓPICO intrauterina con embarazo ectópico. Ocurre


O COMPUESTO aproximadamente en uno de cada 4.000 emba-
razos espontáneos, su incidencia está
Se denomina embarazo heterotópico o com- aumentando con el empleo de las técnicas de
puesto a la coexistencia de una gestación fertilización asistida. El tratamiento es quirúrgico.

TABLA No. 2. TRATAMIENTO QUIRÚRGICO DEL EMBARAZO ECTÓPICO

INDICACIONES
Embarazo ectópico roto
Diámetro mayor de 4 cm
Persistencia del dolor por más de 24 horas
Necesidad de una laparoscopia para establecer el diagnóstico
Embarazo heterotópico

PROCEDIMIENTO
CIRUGÍA CONSERVATIVA
Ectópico ampular: salpingostomía
Ectópico ístmico: resección segmentaria
Ectópico abortándose por la fimbria: expresión de la fimbria

CIRUGÍA RADICAL (SALPINGECTOMÍA)


Hemorragia incontrolable
Lesión extensa de la trompa
Embarazo ectópico recurrente en la misma trompa
Paridad satisfecha (esterilización)

LAPAROTOMÍA
Inestabilidad hemodinámica
Inexperiencia en cirugía laparoscópica (o ausencia de recursos técnicos)
Laparoscopia muy difícil

SEGUIMIENTO
Determinación semanal de _HCG hasta que se encuentre menor de cinco mUI/mL
En ectópico persistente: Metotrexate

B. TRATAMIENTO MÉDICO requiere hospitalización de la paciente, eva-


luación clínica estricta y seguimiento con de-
El tratamiento médico tiene por objetivo tratar terminación semanal de la βHGC hasta que
de conservar la trompa funcionante y evitar se encuentre <5 mUI/mL.
los riesgos y costos del tratamiento quirúrgico.
El tratamiento médico de elección, el más co- Las fallas del tratamiento con metotrexate son
nocido y el más ampliamente usado es el me- más comunes cuando los niveles de βHCG
totrexate. También se han utilizado localmen- son más altos, la masa anexial es grande o
te glucosa hiperosmolar y prostaglandinas. Se hay movilidad del embrión. El Colegio Ameri-

902
CAPÍTULO IX: EMBARAZO ECTÓPICO

cano de Obstetras y Ginecólogos ha publica- ciones para el tratamiento con metotrexate


do las siguientes indicaciones y contraindica- (Tabla No. 3):

TABLA No. 3. TRATAMIENTO DEL EMBARAZO ECTÓPICO CON METOTREXATE

INDICACIONES
* Masa anexial <3 cm (<3,5cm)
* Deseo de fertilidad futura
* βHCG estable o en aumento después del curetaje, con pico máximo < 15.000 mUI/mL
* Mucosa tubárica intacta, sin hemorragia activa (estabilidad hemodinámica)
* Visualización laparoscópica completa del ectópico
* Casos seleccionados de embarazos cervical y cornual

CONTRAINDICACIONES

* Disfunción hepática, TGO del doble de lo normal


* Enfermedad renal, creatinina >1,5 mg/dL
* Ulcera péptica activa
* Discrasia sanguínea, leucocitos <3.000, plaquetas <100.000
* (Pobre cumplimiento de la paciente)
* Actividad cardiaca fetal

El metotrexate se administra en dosis única, Se ha informado éxito en 93% de las pacien-


dosis múltiples variables o por inyección direc- tes así tratadas. La inyección directa de altas
ta en el sitio de implantación. El esquema de dosis de metotrexate en el sitio de implanta-
dosis única consiste en administrar metotre- ción del ectópico bajo guía de ultrasonido o
xate en dosis de 50 mg/m2 de superficie corpo- por laparoscopia disminuye los efectos
ral por vía intramuscular; con éste esquema tóxicos, pero las tasas de éxito (76%) son in-
se obtiene 87% de éxito. Ocho por ciento de feriores a las que se logran con la administra-
las pacientes requieren mas de un tratamiento ción sistémica del medicamento.
con metotrexate; la dosis se repite si en el día
séptimo la βHCG es mayor, igual o su declina- De acuerdo con la revisión de Hajenius y cola-
ción es menor de 15% del valor del día cuarto. boradores (Cochrane Review, 2003) no hay
lugar para el uso de metotrexate local bajo
El esquema de dosis variable consiste en ad- guía laparoscópica. Este modo de administra-
ministrar 1 mg/kg de metotrexate vía intramus- ción es menos efectivo que la salpingostomía
cular en días alternos, intercalados con 0,1 laparoscópica en la eliminación del embarazo
mg/kg de leucovorin de rescate por vía intra- tubárico y conlleva los riesgos propios de la
muscular, hasta que se observe una respues- anestesia y el procedimiento. Si se requiere
ta consistente en la disminución de la βHCG laparoscopia para el diagnóstico, la cirugía la-
mayor a 15% en 48 horas o hasta que se ad- paroscópica es de elección. La inyección de
ministren cuatro dosis (metotrexate en los días metotrexate dentro del saco bajo guía ecográ-
1,3,5 y 7 y leucovorin en los días 2,4,6 y 8). fica transvaginal es menos invasora y más

903
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

efectiva que la inyección intratubárica por lapa- Una secuela importante de la enfermedad (o
roscopia, pero requiere de la visualización del de la persistencia de los factores de riesgo) y
saco y de entrenamiento específico. Sin em- de sus tratamientos es la infertilidad. Aunque
bargo, al comparar el metotrexate local trans- es mayor con los tratamientos radicales,
vaginal con la salpingostomía laparoscópica, también ocurre con los tratamientos conser-
ésta es más efectiva. vadores.

Con base en la evidencia disponible no se de- Uno de los riesgos de la cirugía conservativa
be utilizar el metotrexate en dosis única por y del tratamiento médico es la posibilidad de
no ser lo suficientemente efectivo. Por otro la- que quede tejido trofoblástico viable. Esto ocu-
do, una comparación entre metotrexate sisté- rre en 2-11% con laparotomía y en 5-20% con
mico en dosis múltiple versus salpingostomía la laparoscopia o el metrotrexate. Cuando se
laparoscópica mostró que no había diferencias administra metotrexate debe ocurrir una dis-
a corto ni a largo plazo, aunque la calidad de minución de la HCG entre el día cuarto y el
vida fue mas comprometida con el uso de séptimo de por lo menos 15% y, en medicio-
metotrexate. nes semanales posteriores debe continuar dis-
minuyendo. Si esto no ocurre se requiere un
tratamiento secundario con otra dosis de me-
MANEJO EXPECTANTE totrexate o cirugía. Cuando se hace cirugía
conservativa, si ocurre una declinación me-
Se ha informado resolución espontánea (sin nor del 20% de la HCG cada 72 horas, se debe
tratamiento quirúrgico) en muchos embarazos considerar que se trata de embarazo ectópico
ectópicos (hasta un 68%). El éxito depende persistente y se debe hacer un tratamiento
de una concentración inicial baja, y subse- secundario.
cuentemente en descenso de las hormonas
del embarazo. No obstante, no existen mar-
cadores adecuados para identificar el subgru- PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
po seleccionado de pacientes a quienes se
les puede aplicar éste manejo. En la década pasada varios factores han alte-
rado la importancia relativa de los factores de
riesgo. La prevención de las infecciones de
PRONÓSTICO transmisión sexual relacionadas con la EPI y
sus secuelas puede contribuir a disminuir la
El pronóstico depende de la oportunidad del incidencia del ectópico. Así mismo, se podría
diagnóstico, la precocidad con que se esta- esperar que un diagnóstico temprano de las
blezca el tratamiento, la localización del ectó- infecciones pélvicas y una terapia antibiótica
pico y los recursos hospitalarios. más efectiva reduzca el daño tubárico. Las pa-
cientes en tratamientos de infertilidad perte-
Las complicaciones más severas ocurren necen a grupos de riesgo, deben ser adverti-
cuando se presenta la ruptura. En los Esta- das, requieren vigilancia especial y considerar
dos Unidos el embarazo ectópico contribuye tempranamente la posibilidad del ectópico pa-
con 9% de las muertes maternas directas. Es ra poder llevar a cabo tratamientos conserva-
la primera causa de mortalidad materna en el tivos y evitar las complicaciones. Por otro lado,
primer trimestre del embarazo. parece haber una asociación entre un número
mayor de embriones implantados y la

904
CAPÍTULO IX: EMBARAZO ECTÓPICO

estimulación ovárica con el embarazo hetero- analysis comparing “single dose” and “multidose”
tópico, por lo que estas pacientes requieren regimens. Obstet Gynecol 2003; 101:778-784.
también monitorización más estrecha. Todas 5. Ylstra DL. Tubal pregnancy: a review of current
diagnosis and treatment. Obstet Gynecol Surv
las pacientes con sospecha de ectópico deben
1998; 53:320-328.
ser manejadas en instituciones de salud con 6. Ray Dt, Thorburn J, Lundorff P, et al. A cost-
recursos adecuados para la complejidad de effectiveness study of a randomized trial of lapa-
la patología. roscopy versus laparotomy for ectopic pregnancy.
Lancet 1995; 354:1139-1143.
7. Ajenius PJ, Engelsbel S, Mol BWJ, et al. Rando-
mised trial of systemic methotrexate versus
LECTURAS RECOMENDADAS laparoscopic salpingostomy in tubal pregnancy.
Lancet 1997; 350: 774-779.
8. Hajenius PJ, Mol PWJ, Bossuyt PM, et al. Inter-
1. American College of Emergency Physicians. ventions for tubal pregnancy (Cochrane Review).
Clinical policy: critical issues in the initial evaluation En: The Cochrane Library, Issue 1, 2003. Oxford:
and management of patients presenting to the Update Software.
emergency department in early pregnancy. Ann 9. Pisarka MD, Carson SA, Buster JE. Ectopic
Emer Med 2003; 41:123-133. pregnancy. Lancet 1998; 351:1115-1120.
2. American College of Emergency Physicians. 10. Ruiz A, Ñañez H. Texto de Obstetricia y Perinatolo-
Clinical policy for the initial approach to patients gía. Una contribución a la enseñanza del arte, cien-
presenting with a chief complaint of vaginal cia y tecnología. Universidad Nacional de Colom-
bleeding. Ann Emer Med 1997; 29:435-458. bia, Facultad de Medicina, Departamento de
3. American College of Obstetricians and Gynecolo- Ginecología y Obstetricia. Instituto Materno Infan-
gists. Ectopic pregnancy. Technical Bulletin No. til, Concepción Villaveces de Acosta. Bogotá. 1999.
150. Washington, December 1990. 11. Stovall TG, Ling FW. Single-dose methotrexate:
4. Barnhart Kt, Gosman G, Ashby R, Sammel M. The an expanded clinical trial. Am J Obstet Gynecol
medical management of ectopic pregnancy: a meta- 1993; 168:1759-1765.

905
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO X

Aborto

Ariel Iván Ruiz Parra, MD


Profesor Asociado
Departamento de Ginecología y Obstetricia
Universidad Nacional de Colombia.

DEFINICIONES

L a Organización Mundial de la Salud ha de-


finido el aborto como: “la expulsión o ex-
tracción de su madre de un embrión o feto
antes de las pérdidas consecutivas del emba-
razo. En la actualidad, cuando una paciente
ha presentado dos abortos consecutivos es-
que pese 500 gramos o menos”. Este peso pontáneos, se inicia la investigación como pér-
corresponde a una edad gestacional entre 20- dida recurrente del embarazo debido a que la
22 semanas. Como en el aborto retenido no frecuencia de hallazgos anormales es similar
ha ocurrido la expulsión, se podría definir me- a la que se encuentra cuando se investigan las
jor al aborto corno la interrupción de un em- pacientes después de haber presentado tres o
barazo menor de 20-22 semanas o la pér- más abortos. Las parejas con una historia de
dida de un embrión o de un feto que pesa me- tres abortos consecutivos, sin el antecedente
nos de 500 gramos. Se denomina aborto tem- de un hijo vivo, tienen un riesgo de aborto es-
prano al que ocurre antes de la 12 a semana pontáneo subsecuente de 50%.
de gestación y aborto tardío al que se pre-
senta entre las 12 y las 20 semanas de gesta-
ción. El aborto puede ser espontáneo o indu- ETIOLOGÍA
cido (provocado).
La gran mayoría de los abortos espontáneos
Se calcula que 20-30% de las gestaciones ter- se deben a anormalidades cromosómicas y a
minan en aborto espontáneo; sin embargo, anormalidades morfológicas de los gametos,
hay estudios que indican una incidencia de los embriones o los fetos, incompatibles con
aborto entre 40-50% y aun hasta 80% de to- un desarrollo normal. Entre los abortos que
das las gestaciones cuando se incluyen em- ocurren antes de las 12 semanas de gesta-
barazos muy tempranos. ción se encuentran anomalías cromosómicas
en 50-60% de los casos; la mitad de estas
Se denomina pérdida recurrente del embara- anomalías cromosómicas son trisomías (en
zo a la ocurrencia de tres o más abortos es- particular trisomia 16), aproximadamente un
pontáneos consecutivos. Este término ha reem- cuarto son monosomías X (cariotipo 45, X0);
plazado al de aborto habitual. La pérdida recu- también se encuentran poliploidías (triploidías
rrente del embarazo se clasifica como prima- o tetraploidías) y un pequeño número presenta
ria si la paciente nunca ha tenido un fruto via- translocaciones desequilibradas y otras ano-
ble, o secundaria si la madre ha tenido un bebé malías cromosómicas (Tabla No.1).

906
CAPÍTULO X: ABORTO

En abortos espontáneos tardíos (mayores de cal se diagnostican con mayor frecuencia en


12 semanas de gestación), la incidencia rela- las pacientes con pérdida recurrente de la
tiva de las anormalidades cromosómicas dis- gestación. La Tabla No. 2 muestra una distri-
minuye a aproximadamente 5%. bución relativa de la etiología de la pérdida
recurrente de la gestación.
Otras causas de aborto espontáneo son las
siguientes: anormalidades anatómicas del
aparato genital materno (útero unicorne, úte- TABLA 1. ALTERACIONES CROMOSÓMICAS
ro bicorne, útero tabicado, miomatosis uterina, EN ABORTO INICIAL
incompetencia cervical, cicatrices y adheren-
Tipo de anomalía Frecuencia %
cias uterinas); enfermedades endocrinas ta-
les como la insuficiencia del cuerpo lúteo, el Trisomías
hipotiroidismo, el hipertiroidisrno y la diabe- 16 16,4
tes mellitus no controlada; enfermedades sis- 22 5,7
témicas maternas como el lupus eritematoso, 21 4,7
las enfermedades cardiovasculares y renales 15 4,2
y la desnutrición; infecciones maternas como 14 3,7
sífilis, rubeola, toxoplasmosis, listeriosis, e 18 3
infecciones por el virus herpes 2, virus de in- Otras 14,3
clusión citoplasmática, Chlamydia trachomatis
Monosomía X 18
y Mycoplasrna hominis; factores inmunológi-
Triploidias 17
cos tales como la isoinmunización Rh, la in-
compatibilidad ABO o del sistema Kell; facto- Tetraploidias 6
res tóxicos como el uso de antagonistas del Traslocaciones desequilibradas 3
ácido fólico y el envenenamiento por plomo y Otras 4
traumáticos por lesión directa sobre el útero
en gestaciones del segundo trimestre.

Aunque los factores etiológicos involucrados TABLA 2. DIAGNÓSTICOS EN PAREJAS CON PÉRDIDA
en la pérdida recurrente del embarazo (ante- RECURRENTE DEL EMBARAZO
riormente aborto habitual) son los mismos que
Diagnóstico Frecuencia %
los que se informan para el aborto espontá-
neo individual, es diferente la distribución de Alteración cromosómica
su frecuencia. Por ejemplo, las anormalidades Fetal 20
Müllerianas que se encuentran en 1-3% de Padres 3-5
mujeres con un aborto individual, se pueden Leiomiomas 15-20
diagnosticar en 10-15% de pacientes con pér- Insuficiencia lútea 10-15
dida recurrente de la gestación. La incidencia Anomalías mullerianas 10-15
de anormalidades cromosómicas es menor en Enfermedades autoinmunes 10
los casos de pérdida recurrente del embarazo, Incompetencia cervical 8-15
aunque cuando se realizan cariotipos de alta
Síndrome de Asherman 5
resolución el número de desarreglos que se
diagnostica es mayor. Los desórdenes endo-
crinos, las alteraciones autoinmunes, las ano- La frecuencia relativa de las causas de pérdida
malías Müllerianas y la incompetencia cervi- recurrente de la gestación varía de acuerdo

907
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

con la profundidad de la investigación reali- ción se puede observar la actividad cardiaca


zada a la pareja y al material de aborto y con del embrión, lo cual comprueba la vitalidad del
los intereses particulares de los grupos de in- fruto de la concepción.
vestigación.
También se puede observar el crecimiento del
saco gestacional de 1 mm/día. Cuando se rea-
CUADRO CLÍNICO liza ultrasonido por vía transvaginal estos ha-
llazgos se encuentran aproximadamente una
En una mujer en edad reproductiva que ha semana antes de las fechas mencionadas. Es-
tenido relaciones sexuales y presenta un cua- to significa que se puede diagnosticar en for-
dro clínico caracterizado por dolor hipogástrico ma más precoz la aparición, localización y ca-
intermitente y sangrado, después de retraso racterísticas del embarazo con la ecografía
menstrual o amenorrea, o en quien se ha he- transvaginal.
cho previamente el diagnóstico de embarazo,
hay que sospechar amenaza de aborto. Las concentraciones de hCG se pueden eva-
luar en conjunto con los hallazgos del ultraso-
Con el desarrollo del inmunoanálisis, que per- nido para obtener una mayor precisión diag-
mite la identificación temprana de la fracción nóstica. Cuando los niveles séricos de hCG
beta de la gonadotropina coriónica humana, son del orden de 5.000-6.000 mU/mL debe
se cuenta hoy con un instrumento muy sensi- observarse ya un saco gestacional con la eco-
ble y específico tanto para el diagnóstico como grafía transabdominal; con el transductor
para el seguimiento y manejo de las compli- transvaginal se puede visualizar el saco gesta-
caciones del embarazo temprano. cional cuando el nivel de hCG se encuentra
entre 1.800-2.000 mU/mL.
La gonadotropina coriónica humana (hCG) se
puede detectar en la sangre materna desde Estas dos pruebas han cambiado la forma de
7-l0 días después de la fertilización y guarda interpretar el cuadro clínico, la evolución de
relación directa con el crecimiento trofoblásti- la amenaza de aborto y el diagnóstico del em-
co. En condiciones normales se encuentra una brión no viable, del aborto y del embarazo
duplicación de la concentración de hCG en el ectópico. Por ejemplo, una paciente con retra-
suero materno cada 48-72 horas. Cuando los so menstrual que consulta por sangrado ge-
niveles de la hormona no ascienden adecua- nital tiene una concentración de hCG de 3.000
damente, la curva se aplana, o los niveles mU/mL y hallazgos negativos a la ecografía
descienden antes de la octava semana de trans-abdominal, amerita un estudio transvagi-
gestación, puede inferirse un embarazo de mal nal o un seguimiento de la hormona 48-72 ho-
pronóstico o no viable. ras después. Si el embarazo es normal, la eco-
grafía transvaginal debe mostrar crecimiento
Por otra parte, los estudios ecográficos con intrauterino; y, si el trofoblasto está funcionan-
equipos de alta resolución, permiten visualizar do normalmente, el seguimiento de la hormo-
por vía transabdominal el saco gestacional a na deberá mostrar concentraciones cercanas
las cinco semanas de amenorrea (tres sema- a las 6.000 mU/mL. Un corto tiempo después
nas postconcepción) como un espacio lleno también se observará el saco por ecografía
de líquido apenas medible (dos mm de diáme- transabdominal. Hallazgos diferentes hacen
tro). A la sexta semana aparece el reborde sospechar una gestación de mal pronóstico o
trofoblástico y a la séptima semana de gesta- un embarazo ectópico.

908
CAPÍTULO X: ABORTO

En la actualidad también se ha dado impor- Si se detectan movimientos cardíacos por eco-


tancia a la determinación única de la concen- grafía o se confirma la presencia de un em-
tración de progesterona cuando se investiga brión viable, el pronóstico depende del grado
el pronóstico de un embarazo. Una concen- de desprendimiento que se observe; cuando
tración de progesterona por debajo de 15 ng/ el desprendimiento es pequeño el pronóstico
mL se relaciona con gestaciones intrauterinas generalmente es bueno, desaparece el san-
de mal pronóstico y con embarazo ectópico. grado y la gestación continua su curso. En
No se requiere seguimiento de esta hormona 50% de los casos evoluciona hacia el aborto
en la investigación subsiguiente. con tres cuadros clínicos: el aborto retenido,
el aborto incompleto o el aborto completo.
Desde el punto de vista clínico el aborto se
clasifica de la siguiente forma: Conducta. Ante una consulta compatible con
este cuadro se procede de la manera siguiente:
1. Ecografía para descartar una mola o un
AMENAZA DE ABORTO embarazo ectópico y precisar si existe o
no una vida embrionaria o fetal.
La amenaza de aborto consiste en un cuadro 2. Determinación de βhCG
clínico caracterizado por sangrado de origen 3. Mientras no se cuenta con el resultado de
endouterino, generalmente escaso, que se estas exploraciones, reposo en cama. Hos-
presenta en las primeras 20 semanas de ges- pitalizar si existen presiones familiares, se
tación, acompañado de dorsalgia y dolor tipo trata de aborto a repetición o el embarazo
cólico menstrual. Al examen obstétrico se en- ha sido calificado previamente de alto riesgo.
cuentra el cuello largo y cerrado. Se considera 4. Abstención del coito.
que 50% de las amenazas de aborto terminan 5. Administrar sedantes uterinos si persisten
en aborto a pesar de cualquier medida tera- las contracciones dolorosas.
péutica. 6. Procurar tranquilizar a la paciente y a sus
familiares. Si la consulta es telefónica con
El tratamiento es el reposo absoluto en cama, el médico de urgencia, éste aconsejará a
con sedación según el estado de ansiedad de la paciente ser vista por el medico tratan-
la paciente. También pueden utilizarse analgé- te, con el informe de ecografía.
sicos antiespasmódicos para aliviar el dolor.
Tratamiento médico. Si la ecografía demues-
En los embarazos tempranos es importante tra viabilidad ovular y las pruebas bioquímicas
definir el pronóstico del embarazo, si existe son normales, se debe instaurar reposo y pre-
embrión y si está vivo. El estudio ecográfico cisar si existen o no causas metabólicas, in-
es una ayuda invaluable para precisar el diag- fecciosas o de otro tipo para la amenaza de
nóstico. En los casos de embrión vivo pueden aborto.
observarse zonas de desprendimiento o san-
grado o sacos de implantación baja. 1. Sí la ecografía aún no revela placa em-
brionaria o existe un desfase entre la edad
Si de manera inequívoca no se detecta em- gestacional real y la ecografía, pero la prue-
brión (huevo anembrionado) debe procederse ba inmunológica es positiva, solicitar una
a la evacuación, mediante dilatación cervical nueva ecografía en dos semanas y en el
y curetaje. intervalo hacer guardar reposo a la
paciente.

909
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Sí la ecografía demuestra viabilidad ovular, ABORTO RETENIDO


pero demuestra un cierto desprendimiento
placentario se debe instaurar reposo ab- En estos casos el embrión muere o se despren-
soluto. de pero queda retenido dentro del útero. Debe
sospecharse cuando el útero no aumenta de
tamaño, los síntomas y signos del embarazo
ABORTO EN CURSO disminuyen hasta desaparecer y el control eco-
gráfico visualiza embrión sin actividad cardiaca,
Se define como aborto en curso al cuadro clí- con distorsión del saco gestacional, disminu-
nico caracterizado por contracciones uterinas ción del líquido amniótico y, en embarazos del
dolorosas, intermitentes y progresivas acom- segundo trimestre, cabalgamiento de los hue-
pañadas de borramiento y dilatación cervica- sos del cráneo. El advenimiento de la ecografía
les y sangrado de origen uterino. Las membra- permite el diagnóstico de la muerte embrionaria
nas ovulares se encuentran íntegras. El trata- y de la muerte fetal en forma precoz; por esta
miento consiste en hidratación, administrar razón, para el manejo clínico no tiene lugar en
analgésicos parenterales, reforzar la actividad la actualidad el considerar aborto retenido so-
uterina si es necesario y esperar la expulsión lamente a aquel que tiene tres o más semanas
fetal para proceder al legrado o la revisión de muerte intrauterina.
uterina.
Conducta. El tratamiento del aborto retenido
Conducta. Hospitalización inmediata de la pa- depende de la edad gestacional y del tamaño
ciente. Revisión de los exámenes de labora- uterino. En embarazos tempranos consiste en
torio. Solicitar hemograma, hemoclasificación. la evacuación del útero mediante dilatación y
legrado. En gestaciones avanzadas (mayores
Si se trata de un aborto de primer trimestre: de doce semanas) debe llevarse a cabo la ma-
• Legrado uterino, previa dilatación del cue- duración cervical con prostaglandinas y la in-
llo uterino. Si es posible constatación eco- ducción con oxitocina. La oxitocina puede ini-
gráfica posterior de la evacuación uterina. ciarse mezclada con dextrosa al 5% o Lactato
• Efectuar siempre exploración vaginal bajo de Ringer a una tasa de infusión de 1 mU/mL.
anestesia en el momento del legrado, para La velocidad de la infusión puede duplicarse
descartar un posible embarazo ectópico. cada 15 minutos hasta obtener contracciones
Anotar en la historia clínica los datos obte- uterinas adecuadas. Cuando el feto se expul-
nidos. se se debe practicar legrado o revisión uterina
con el fin de completar la evacuación de los
Aborto de segundo trimestre: anexos ovulares.
• Si el cuello uterino está abierto o semiabier-
to, si existe una dinámica uterina instaurada
y si la metrorragia no es alarmante, procu- ABORTO INCOMPLETO
rar el vaciamiento del útero mediante goteo
de oxitocina (15-30 UI de oxitocina en 500 Se denomina aborto incompleto al cuadro clí-
mL de Lactato de Ringer). Después de la nico caracterizado por la expulsión parcial de
expulsión del feto, practicar revisión uterina. los productos de la concepción. Cuando que-
En lo posible evitar el uso de las legras. da retenida la placenta el tratamiento consis-
te en completar el aborto por medio del legrado
o la revisión uterina.

910
CAPÍTULO X: ABORTO

La pérdida del líquido amniótico ya configura el punto de vista clínico se identifica porque
un cuadro de aborto incompleto; sin embar- desaparece el dolor y el sangrado activo des-
go, se utiliza el término de aborto inevitable pués de la expulsión de todo el producto de la
cuando las contracciones uterinas son más concepción. Puede persistir un sangrado es-
enérgicas, el cuello sufre borramiento y dila- caso por algún tiempo.
tación, las membranas están rotas y se pal-
pan a través del cuello las partes fetales. En Tratamiento. Cuando ocurre en embarazos
estos casos el tratamiento consiste en hidratar tempranos el tratamiento consiste en la ob-
la paciente, reforzar la actividad uterina con servación solamente, confirmación por eco-
oxitocina si es necesario, administrar analgé- grafía y, si se considera necesario, el segui-
sicos parenterales y esperar la expulsión del miento de la hCG.
feto. Posteriormente se procederá a practicar
legrado o revisión uterina.
LECTURAS RECOMENDADAS
Conducta. Hospitalización, ordenar hemogra-
ma, hemoclasificación y serología. 1. Carr B, Blackwell R. Textbook of Reproductive
Medicine. Second edition. Appleton & Lange.
Si se trata de un aborto incompleto y la pérdi- Norwalk, 1998.
2. Crowley T, Low N, Turner A, Harvey I, et al.
da sanguínea es notable, es necesario reali-
Antibiotic prophylaxis to prevent post-abortal upper
zar legrado uterino inmediato con goteo genital tract infection in women with bacterial
oxítocico simultáneo. vaginosis: randomised controlled trial. BJOG 2001;
108:396-402.
Los cuidados posteriores incluyen: 3. De Cherney A, Nathan L, et al Current Obstetric
• Goteo oxitócico durante 2-3 horas después and Gynecologic Diagnosis and Treatment. 9 th
de la evacuación uterina. Edition. Appleton& Lange. Norwalk, 2002.
• Globulina anti D en las pacientes Rh nega- 4. Jabara S, Barnhart KT. Is Rh immune globulin
needed in early first-trimester abortion? A review.
tivas.
Am J Obstet Gynecol 2003; 188:623-627.
• Efectuar un adecuado soporte psicológico. 5. Lee DT, Cheung LP, Haines CJ, et al. A comparison
of the psychologic impact and client satisfaction
Al dar de alta se debe instruir a la paciente en of surgical treatment with medical treatment of
los siguientes tópicos: spontaneous abortion: a randomized controlled
• No usar tampones o duchas vaginales, y trial. Am J Obstet Gynecol 2001; 185:953-958.
abstenerse del coito durante tres semanas. 6. Lozano A. Peralta MT, Reyes F et al. Morbimor-
• Aconsejar visita médica en caso de fiebre, talidad del aborto séptico en el Instituto Materno
Infantil de Bogotá. Rev Col Obst Ginecol 1983;
dolor suprapúbico o aumento brusco de la
32:104-134.
pérdida hemática. 7. Rawling MJ, Wiebe ER. A randomized controlled
• Control en consulta externa a las 4-6 se- trial of fentanyl for abortion pain. Am J Obstet
manas. Gynecol 2001; 185:103-107.
8. Scott JR. Immunotherapy for recurrent miscarria-
ge. Cochrane Database Syst Rev. 2003;(1):
ABORTO COMPLETO CD000112.

Se denomina aborto completo a la situación


en la cual hay expulsión total del embrión o
del feto y de las membranas ovulares. Desde

911
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XI

Hemorragias de la segunda mitad del embarazo


placenta previa y abruptio de placenta

Wilmar García Sacipa, MD


Instructor Asistente
Departamento de Ginecología y Obstetricia
Universidad Nacional de Colombia.
Instituto Materno Infantil.
Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

L os sangrados genitales de la segunda mi-


tad del embarazo complican 6% de las
gestaciones. Las causas son placenta previa
razón de la falta de correlación con incremen-
to o disminución de la morbilidad asociada así
como por su poca utilidad clínica.
en 13%, abruptio en 7% y secundario a traba-
jos de parto pretérmino o a término, o secun- Noventa por ciento de las placentas que se
darios a lesiones locales del tracto genital in- clasifican como previas en la mitad del emba-
ferior en 80%. En algunos casos no se logra razo se reclasifican como normales en el se-
identificar el lugar del sangrado. guimiento, en razón de la formación del seg-
mento y del crecimiento uterino. Este fenóme-
no se denomina migración placentaria.
PLACENTA PREVIA
DEFINICIÓN Y CLASIFICACIÓN FACTORES DE RIESGO

Se refiere a la cercanía de la placenta con Entre los factores que incrementan el riesgo
respecto al orificio cervical interno (OCI), defi- de presentación en orden de importancia
niéndose como previa aquella que se encuen- están:
tra en relación con este.
• Antecedente de placenta previa.
Se clasifica como previa la que cubre parcial • Antecedente de cesárea.
o totalmente el OCI y como marginal, la que • Edad avanzada.
se halla máximo a 3 cm del OCI sin cubrirlo. • Multiparidad.
• Aborto inducido.
Las definiciones de placenta previa parcial, • Tabaquismo.
total o de inserción baja, se han abolido en • Uso de cocaína.

912
CAPÍTULO XI: HEMORRAGIAS DE LA SEGUNDA MITAD DEL EMBARAZO PLACENTA PREVIA Y ABRUPTIO DE PLACENTA

CUADRO CLÍNICO • Hemoglobina menor de 7 g/dL.


• No se logra el control en la reanimación.
Sangrado genital de aparición súbita, rutilan- e. Desembarazar por cesárea independien-
te e indoloro. Se presenta en 30 % antes de temente de la edad de gestación en caso
la semana 30, 30% entre 30.35 semanas, 30 de no lograr el control del sangrado.
% antes del trabajo de parto y 10 % aparecen
durante el sin episodios previos de sangrado. Para asegurar el estado fetal se debe:

El tacto vaginal en manos expertas identifica a. Definir la edad de gestación claramente.


60 % de las placentas previas, puede intensi- b. Conocer el estado fetal actual por medio
ficar el sangrado en 16% de los casos, lo que de:
puede llevar a shock hipovolémico. • Movimientos fetales.
• Fetocardia.
La ecografía es un paso necesario para el • Monitoría sin estrés.
diagnóstico de la placenta previa excepto en • Perfil biofísico.
los casos de inestabilidad hemodinámica que
requiera resolución quirúrgica inmediata del Para evitar las complicaciones se debe:
sangrado.
a. Desembarazar toda gestación mayor de 36
La ecografía trasvaginal hace el diagnóstico semanas o se identifica madurez pulmonar
más preciso de la entidad en los casos en los fetal.
cuales no es posible definir con claridad el b. Reposo en cama hasta el momento del
orificio cervical interno, evitando los falsos parto, si hay control del sangrado.
negativos y positivos. c. Inducción de maduración pulmonar con
corticoides a toda gestación entre 26-34
semanas.
MANEJO d. Útero inhibición en caso de presentar acti-
vidad uterina.
Los objetivos terapéuticos son: e. Realizar seguimiento ecográfico en busca
• Asegurar el estado materno. de retardo del crecimiento intrauterino
• Asegurar el estado fetal. (RCIU) y signos de placenta acreta.
• Evitar las complicaciones. f. Practicar amniocentesis para perfil de ma-
duración pulmonar a partir de la semana
Para lograr asegurar el estado materno se 34 semanalmente.
debe:

a. Definir el estado hemodinámica inicial y las COMPLICACIONES


pérdidas estimadas de sangre.
b. Clasificar el grado de sangrado como leve, Acretismo placentario
moderado o severo.
c. Iniciar de inmediato la reanimación con lí- Corresponde a la invasión trofoblástica del
quidos endovenosos. miometrio. Puede ser íncreta si invade miome-
d. Definir la necesidad de transfusión, si: trio sin llegar a la serosa o pércreta si lo inva-
• Presencia de ortostatismo después de de y lo sobrepasa.
la reanimación.

913
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Se asocia principalmente con incisiones uteri- ABRUPTIO DE PLACENTA


nas anteriores. El riesgo de acretismo en pla-
centa previa es de 15 % si hay cesárea ante- DEFINICIÓN Y CLASIFICACIÓN
rior, pero si hay dos o más incrementa a 50%
Es el desprendimiento prematuro de la pla-
El diagnóstico se debe realizar por medio de centa normalmente insertada, con lo cual se
ecografía transabdominal y transvaginal. Se produce una hemorragia en el interior de la
observa: decidua basal que impide la oxigenación fetal.

• Pérdida de la ecogenicidad retroplacentaria. Se clasifica según la severidad del sangrado


• Presencia de digitaciones en el miometrio. en:
• Presencia de espacios intervellosos en el
miometrio. • Grado I: sin repercusión perinatal, diagnós-
• Identificación por doppler de vasos a ese tico posparto.
nivel. • Grado II. clínica clara de abruptio y feto vivo
con estado fetal alterado.
El manejo se hace con histerectomía intra- • Grado III: óbito fetal secundario.
parto. En caso de placenta pércreta se debe
evitar la extracción placentaria de inmediato,
para lo cual se da manejo médico con meto- FACTORES DE RIESGO
trexate para enfriar el proceso y posteriormen-
te, realizar la histerectomía en un segundo • Preeclampsia e hipertensión crónica:
tiempo quirúrgico. - Abuso de cocaína.
- Trauma.
- Anomalías del cordón y el útero.
PREMATUREZ - Tabaquismo.
- Edad materna mayor y multiparidad.
Es la complicación mas frecuente de la pla-
centa previa con la morbilidad asociada (difi-
cultad respiratoria del neonato, hipotermia, PRESENTACIÓN CLÍNICA
alteracion hidroelectrolítica, alteración meta-
bólica y mayor probabilidad de sepsis Los síntomas del abruptio son sangrado ge-
neonatal). nital oscuro, dolor abdominopélvico intenso y
contracciones uterinas.

RESTRICCIÓN DEL CRECIMIENTO La ecografía es de poca utilidad en el diag-


INTRAUTERINO nóstico aunque puede observarse en estados
tempranos y tardíos la presencia de sangre
Los fetos con placenta previa presentan una retroplacentaria.
posibilidad de RCIU de 16%.
El diagnóstico se basa en la clínica y la pre-
sencia de alteración del estado fetal eviden-
ciado por pérdida de la reactividad, la variabi-
lidad y alteración de los parámetros biofísicos.

914
CAPÍTULO XI: HEMORRAGIAS DE LA SEGUNDA MITAD DEL EMBARAZO PLACENTA PREVIA Y ABRUPTIO DE PLACENTA

MANEJO COMPLICACIONES
Los objetivos terapéuticos en el abruptio de COAGULACIÓN INTRAVASCULAR
placenta son: DISEMINADA
• Asegurar el estado fetal.
• Asegurar el estado materno. Se identifica en 10% de las pacientes con
• Definir y manejar la causa. abruptio. Es más grave en las pacientes con
• Evitar las complicaciones. óbito fetal secundario. Se genera por un fe-
nómeno protrombótico local con depleción
Para asegurar el estado fetal se debe: sistémica del fibrinógeno y de la producción
1. Definir la viabilidad fetal. En caso de óbito de fibrina con hipofibrinogenemia.
fetal desembarazar.
2. Definir la edad de gestación, si es mayor
de 37 semanas se debe desembarazar ÚTERO DE COUVALLIER
definiendo la vía según la indicación obs-
tétrica. Es una complicación posparto secundaria a
la infiltración eritrocitaria del endometrio que
Para la definición de la causa se debe: le da un aspecto violáceo sin permitirle la con-
1. Practicar una historia clínica completa bus- tracción adecuada, lo que lleva a hemorragia
cando los factores de riesgo descritos. profusa. El tratamiento es la histerectomía
2. Realizar un examen físico detallado en
busca de estigmas de farmacodependencia
o de trauma. LECTURAS RECOMENDADAS
3. Practicar laboratorios que indiquen compro-
miso de otros órganos secundario a 1. Ananth C. Placental abruption and its assosiation
preeclampsia. with hypertension and prolonged rupture of
membranes. A methodologic riview and
methaanalysis. Obstet Gynecol 1996; 88:309-318.
Para evitar las complicaciones se debe:
2. Hibbard B. Abruptio placentae. Obstet Gynecol
1. Inducir la maduración pulmonar fetal a toda 1996; 27:155-71
gestante entre 26-34 semanas con abruptio 3. Hladky K, Yankowitz J, Hansen WF. Placental
y feto vivo. abruption. Obstet Gynecol Surv 2002; 57:299-305.
2. Evaluar periódicamente el estado fetal. Si 4. Krammer M. Etiologic determinations of abruptio
es satisfactorio en el ingreso se puede ree- placentae. Obstet Gynecol 1997; 89: 221-224.
valuar cada 24 horas si no hay deterioro. 5. Lerner J. Characterization of placenta accreta ussing
3. Utilizar útero inhibidores si: transvagynal sonography and color Doppler imaging.
Ultrasound Obstet Gynecol 1995; 5:198-201.
• Es pretérmino.
6. Newton E. The epidemiology and clinical history
• Tiene estado fetal satisfactorio. of asymptomatic midtrimester placenta previa. Am
• No hay descompensación materna. J Obstet Gynecol 1984; 148:743-748.
• No hay signos de persistencia del 7. Silver L. Placenta previa percreta with bladder
abruptio. involvement: New considerations and review of the
• Se descarta preeclampsia. literature. Ultrasound Obstet Gynecol 1997; 9:131-
4. Evaluar el perfil de coagulación materno y 138.
el estado fibrinolítico. 8. Taylor V. Placenta previa and prior cesarean
delivery: how strong is the association? Obstet
Gynecol 1994; 84:55-57

915
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XII

Abuso sexual

José Luis Tarazona, MD


Departamento de Ginecología-Obstetricia
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN EPIDEMIOLOGÍA

E l término ABUSO SEXUAL se define como


cualquier forma de actividad sexual no
consentida, dentro de lo cual se incluye una
La real magnitud del problema no se conoce,
dado que se estima un subregistro muy alto
de este delito. La prevalencia en los Estados
gama de actividades sexuales no deseadas Unidos reportada por el Departamento de Jus-
que van desde la insinuación hasta el acceso ticia mostró que en 1998 se presentaron
carnal, o sea la penetración. Para que un acto 30.8569 violaciones en mujeres mayores de
se pueda definir como abuso, debe cumplir 12 años y 21.519 en hombres mayores de 12
con tres elementos, a saber: años. Los adolescentes son el grupo de mayor
riesgo. Se ha reportado una tasa anual de 3,5
1. Uso de la fuerza física o emocional y/o co- por 1.000 personas para las edades entre los
locación de la víctima en incapacidad para 12 y los 15 años, de 5,0 por 1.000 para las
discernir por medio de substancias edades entre los 16 y los 19 años, de 4,6 por
psicotrópicas. 1.000 para las edades entre los 20 y los 24
2. Contacto sexual. años y de 1,7 por 1.000 para las edades entre
3. Desacuerdo de la víctima. los 24 y los 29 años.

Desde el punto de vista legal y clínico, la vio- Los abusos en adolescentes menores provie-
lación se define como “coito forzado” que ocu- nen frecuentemente de personas conocidas
rre bajo fuerza física o coerción psicológica. o de familiares, lo cual se observa hasta en
La violación se define como el abuso sexual 75% de los casos, mientras en los adolescen-
en el que se produce penetración vaginal, anal tes mayores se relacionan con actividades so-
u oral del ofendido por el agresor; incluso pue- ciales que incluyen el consumo de alcohol o
de realizarse con cuerpos extraños. de agentes psicotrópicos, entre los cuales
unos de los más utilizados son el flunitrazepam
Este crimen violento coloca a la víctima en (Rohypnol) y la escopolamina. Hasta 40% de
riesgo de daño físico, trastornos emocionales, los casos de violación en adolescentes se
enfermedades de transmisión sexual y asocian con el uso de substancias psicotrópi-
embarazo. cas. Un grupo de especial riesgo son los me-
nores con discapacidades mentales. Final-
mente, en los adultos es más frecuente el uso
de la fuerza física para perpetrar el hecho.

916
CAPÍTULO XII: ABUSO SEXUAL

En Colombia, según informe de la Fiscalía Ge- recomienda una nueva prueba de embarazo
neral de la Nación, se estima que apenas 10% a las tres semanas.
de los casos son denunciados. En el año 2000
fueron denunciados 17.540 casos, en el 2001
30.518 y en 2002 24.323 casos. El delito más RIESGO DE ENFERMEDADES
denunciado es un acto sexual con un menor
de 14 años, seguido por acceso carnal violento
DE TRANSMISIÓN SEXUAL
y acceso carnal abusivo en un menor de 14 Y PROFILAXIS
años. Por departamentos, los Santanderes, el
Valle y Cundinamarca son las regiones que Las enfermedades de transmisión sexual más
reportan una mayor frecuencia. frecuentemente estudiadas son la gonorrea,
sífilis, infección por clamidia, papilomavirus y
otros causantes de vaginitis, como tricomonas
RIESGO DE EMBARAZO y monilias.
Y PROFILAXIS
El riesgo de adquirir estas enfermedades va-
El riesgo de un embarazo por una violación ría de acuerdo con la edad y el sexo de la
asciende hasta 5%, por lo cual se recomien- víctima. Parece que el estímulo hormonal lue-
da ofrecer la posibilidad de profilaxis a las go de la pubertad puede alterar la transmi-
pacientes, habiendo descartado previamente sión de algunas enfermedades en forma no
un embarazo por historia clínica y pruebas de muy clara. Se estima que la prevalencia de
embarazo en sangre. gonorrea en mujeres violadas es de 0-26%,
la de infección por clamidia de 4-17% y de
Para la profilaxis se recomienda un anovula- sífilis de 0-5,6%. El riesgo de infección por VIH
torio que contenga etinilestradiol y norgestrel, existe, pero no hay consenso sobre la nece-
lo cual equivale a 100 mg de etinilestradiol ca- sidad de iniciar profilaxis en todos los casos.
da 12 horas por 2 tomas, por ejemplo, Ovral 2
tab. cada 12 horas, o una tableta que conten- Se recomienda el siguiente esquema de pro-
ga levonorgestrol 0,75 mg y repetir en 12 ho- filaxis antibiótica: ceftriaxona 250 mg IM o
ras; este tratamiento debe efectuarse dentro espectomicina 2 g IM, más metronidazol 2 g
de las 72 horas siguientes al asalto. por vía oral en 1 toma más doxiciclina 100 mg
por vía oral cada 12 horas por 7 días o azitro-
La utilización del dispositivo intrauterino micina 1 g por vía oral en una sola dosis.
también está descrita para pacientes que con-
sultan entre las 71 ó 72 horas y los 5 días Se recomienda protección contra hepatitis B si
siguientes al abuso; sin embargo, el riesgo de no hay vacuna previa y se debe iniciar el es-
enfermedades de transmisión sexual y una quema de vacunación en la evaluación inicial.
posible enfermedad inflamatoria pélvica ha-
cen que su utilización se restrinja a pacientes
en quienes se pueda descartar en forma se- PRINCIPALES HALLAZGOS
gura la infección genital. Es probable que con DE TRAUMA FÍSICO
la utilización de los estrógenos por vía oral se
presenten náusea y vómito, por lo cual se Con la inclusión del estudio colposcópico en
recomienda el uso simultáneo de un antie- víctimas de violación se ha determinado que
mético. El método no es infalible, y por ello se más de 90% presentan algún tipo de lesión

917
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

genital que puede ser corroborada dentro de VALORACIÓN INICIAL


las 48 horas después del trauma. Este porcen- Y EXAMEN FÍSICO
taje es muy alto si se compara con 10% de
las pacientes con lesiones leves luego de coi- Es de gran importancia tener en cuenta las
to consentido. siguientes recomendaciones que hace la Fis-
calía General de la Nación con el objeto de
Las estructuras anatómicas más frecuente- preservar las pruebas contra el o los agreso-
mente lesionadas en su orden son: labios me- res que hayan cometido el abuso:
nores, himen, fosa navicular, ano, cérvix, vagi-
na, periné, región periuretral, labios mayores Denuncie ante alguna autoridad: Policía Na-
y recto. Es necesario tener siempre en mente cional, Unidades Judiciales, Oficina de Quejas
el riesgo de lesión intraabdominal en especial y Contravenciones, DAS, Unidades de Reac-
en adolescentes menores y en infantes. Otro ción Inmediata del C.T.I., Unidad de Delitos
tipo de trauma, como por ejemplo fracturas o Sexuales y Menores C.T.I., Unidad de Delitos
trauma craneoencefálico, debe ser siempre Contra la Libertad Sexual y la Dignidad Hu-
tenido en cuenta y explorado exhaustivamen- mana de la Fiscalía y Comisarías de Familia.
te, especialmente en los casos en que el agre-
sor ha usado la fuerza y la violencia física. La víctima no debe cambiarse de ropa o, si ya
lo ha hecho, debe llevar las prendas a la auto-
ridad que recibe la denuncia, porque en ellas
pueden quedar evidencias indispensables en
ALTERACIONES Y REACCIONES la investigación.
PSICOLÓGICAS POST ABUSO
En lo posible, deben conservarse los elemen-
El trastorno de estrés post traumático se re- tos que se utilizaron para llevar a cabo la agre-
conoce en cerca de 80% de las víctimas de sión (cuchillos, cuerdas, palos y armas de fue-
abuso sexual. Es un síndrome que se carac- go) para entregarlos a las autoridades.
teriza por una fase inicial de días a semanas
de duración, durante la cual hay labilidad emo- La autoridad que recibe la denuncia debe rea-
cional, ansiedad, temor y sentimientos de cul- lizar una completa entrevista en la cual pre-
pa; luego aparece una fase de reorganización, gunte todas las circunstancias de tiempo, mo-
en la cual la víctima entra en periodos de ajus- do y lugar. Posteriormente debe remitir a la
te, recuperación e integración, fase que pue- víctima al Instituto Colombiano de Medicina
de durar meses o años. Otros componentes Legal y Ciencias Forenses. Si es menor de
del síndrome son la pérdida de autoconfianza edad, debe ser remitida directamente a la Uni-
que puede llevar al aumento del consumo de dad de Menores de Medicina Legal, donde se
alcohol y de psicotrópicos, alteraciones en la le practicarán los siguientes exámenes: exa-
actividad sexual, mala técnica en el uso de men médico para describir todas las lesiones
anticonceptivos, con un aumento de embara- ocasionadas durante la agresión y para de-
zos indeseados y/o abortos. Dado que la res- terminar la incapacidad médico-legal; exa-
puesta al trauma es diferente en cada caso, men de laboratorio para toma de muestras de
se recomienda desde el primer encuentro una sangre, semen u otras sustancias; y evalua-
valoración por personal capacitado en salud ción psiquiátrica o psicológica.
mental para su manejo inicial y posterior se-
guimiento. Es importante preservar la mayor cantidad de
evidencias que puedan conducir a la ubica-

918
CAPÍTULO XII: ABUSO SEXUAL

ción del agresor: prendas, elementos, y sus- no, enfermera, trabajadora social, que pro-
tancias orgánicas. mueva una sensación de confianza y seguri-
dad a la víctima.
El proceso debe ser remitido a la Unidad Es-
pecializada en Delitos Contra la Libertad Se realiza un examen físico completo, recor-
Sexual y la Dignidad Humana. Allí el fiscal cita dando las implicaciones legales que puede
nuevamente a la víctima con el objeto de que tener, siempre en compañía de una enferme-
aporte nuevos datos que pueden ser de gran ra y si es posible de un familiar de la víctima.
importancia para el avance del proceso y el
esclarecimiento de los hechos. La toma de muestra de laboratorio está enca-
minado a descartar embarazo y enfermeda-
La víctima o sus acudientes (en caso de me- des de transmisión sexual: VDRL, VIH, hepa-
nores de edad) y los testigos son citados por titis B, infección por clamidia, por frotis y cul-
la Unidad de Delitos Sexuales y Menores del tivos de vagina, recto o faringe, según el caso,
Cuerpo Técnico de Investigación, donde se para gonococo, tricomonas, monilia y otros
entrevista a la víctima y a los testigos. Si es gérmenes como ureaplasma y micoplasma.
necesario, se realiza intervención por parte del Se toman muestras de sangre para alcohole-
psicólogo, quien es el enlace entre la víctima mia y psicotrópicos.
y el investigador en la obtención de informa-
ción cuando se trata de menores de edad o Las heridas físicas se manejan según los ha-
de víctimas en crisis. En este estado de la in- llazgos. Se debe aplicar profilaxis antitetánica
vestigación se practican diligencias tales como si hay heridas expuestas.
reconocimiento del lugar de los hechos, tra-
bajo de vecindario, labores de inteligencia, Se inicia profilaxis para embarazo y para en-
vigilancias, realización de pruebas técnicas fermedades de transmisión sexual.
con la colaboración de la Sección de Crimina-
lística (elaboración de retratos hablados, trans- Se hace una valoración psicológica inicial y la
cripción de casetes, revelado y ampliación de correspondiente remisión a terapia psicológi-
fotografías) y demás pruebas que sean solici- ca especializada.
tadas por el Fiscal de conocimiento.
Se recomienda que la paciente asista a la
En Bogotá, las víctimas de estos delitos pue- consulta externa para practicar nuevamente
den acudir al Centro de Atención Integral a exámenes de laboratorio, prueba de embara-
Víctimas de Delitos Sexuales, ubicado en la zo a las tres semanas y VDRL-VIH y pruebas
Diagonal 34 No. 5-18, Teléfonos: 2880557, de hepatitis B a las seis semanas.
2324011 o 2322478.

Una vez que ha ingresado una posible vícti- LECTURAS RECOMENDADAS


ma de violación a un servicio de urgencias,
se deben poner en práctica todas las reco-
1. American College of Obstetricians and Gynecol-
mendaciones legales. gists. ACOG educational bulletin: sexual assault.
No.242, November 1997.
El interrogatorio debe desarrollarse en un am- 2. Bechtel K, Podrazik M. Evaluation of the adoles-
biente muy tranquilo, siempre en compañía cent rape victim. Pediatr Clin North Am 1999; 46:
de un familiar o una persona de sexo femeni- 809-823.

919
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

3. Beck-Sague CM, Solomon F. Sexually transmitted 8. Hansen-Flaschen J, Adler BS. Allegations of


diseases in abused children and adolescent and sexual abuse in an intensive care unit. Crit Care
adult victims of rape: review of selected literature. Med 1999; 27:437-440.
Clin Infect Dis 1999; 28:74S-83S. 9. Hutson LA. Development of sexual assault nurse
4. Campbell JC. Health consequences of intimate examiner programs. Nurs Clin North Am 2002;
partner violence. Lancet 2002; 359:1331-1336. 37:79-88.
5. Committee on Adolescence American Academy of 10. Kaplan DW, Feinstein RA, Fisher MM, et al. Care
Pediatrics. Care of the adolescent sexual assault of the adolescent sexual assault victim. Pediatrics
victim. Pediatrics 2001; 107:1476-1479. 2001; 107:1476-1479.
6. Fiscalía General de la Nación. Boletín de prensa 11. Linden JA. Sexual assault. Emerg Med Clin North
0028. www.fiscalia.gov.co Am 1999; 17:685-697.
7. Fong C. Post-exposure prophylaxis for HIV
infection after sexual assault: when is it indicated?.
Emerg Med J 2001; 18:242-245.

920
CAPÍTULO XIII: MASTITIS PUERPERAL

CAPÍTULO XIII

Mastitis puerperal

Manuel Esteban Mercado Pedroza, MD


Profesor Asociado
Departamento Obstetricia y Ginecología,
Universidad Nacional de Colombia.
Coordinador Comité Lactancia Materna,
Instituto Materno Infantil.
Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

E l trastorno más común de tipo inflamato-


rio en la mama activada por el proceso de
la lactancia, es la mastitis, que se puede pre-
de la boca o nariz del recién nacido o de focos
de la madre (generalmente del pezón), se
complica el cuadro inflamatorio inicial con una
sentar en 1-10% de mujeres en período de infección bacteriana difusa del parénquima
lactancia, con el mayor número de casos en (mastitis) que puede progresar a acumulacio-
las tres primeras semanas del post-parto. Es nes de pus con destrucción de tejido (absce-
más frecuente en primíparas que en multíparas. sos). El germen más común es el Staphyloco-
ccus aureus que se adquiere fácilmente por
el recién nacido en los centros hospitalarios;
FISIOPATOLOGÍA algunas veces el cuadro puede ser producido
por estreptococos o bacilos coliformes.
El tejido glandular del seno esta formado por
gran número de acinos que forman los lobuli-
llos y éstos, a su vez, a los lóbulos, los cuales CUADRO CLÍNICO
tienen ductos que confluyen sucesivamente
hasta desembocar en el pezón. Cuando se El signo inicial de conducto obstruido se iden-
obstruye en forma ocasional alguno de estos tifica en un área específica en forma de cordón
conductos, en especial cuando la leche no flu- grueso o de empastamiento doloroso, con es-
ye permanentemente por alteraciones en el casos signos de rubor, calor y mínimas mani-
patrón de lactancia, pueden suceder dos even- festaciones en el estado general. Al producir-
tualidades según el sitio de obstrucción: se la contaminación y posterior infección apa-
recen la fiebre, escalofríos, cefalea, malestar
1. Dilatación de un conducto de buen tama- general y sensación de cansancio con signos
ño (galactocele). de rubor y dolor progresivos e irradiación a
2. No evacuación del acino (quiste lácteo). espalda y cuello. El diagnóstico se realiza pri-
mordialmente por el examen físico y con ayu-
Si la obstrucción persiste y se produce conta- das paraclínicas como el hemograma, que
minación por microorganismos procedentes muestra leucocitosis, cultivos cuando se evi-

921
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

dencien secreciones y ocasionalmente la eco- miento antibiótico por 8-10 días. La pacien-
grafía mamaria para identificar colecciones te puede requerir curaciones hasta por seis
purulentas parenquimatosas (abscesos). semanas. La cicatriz resultante puede sig-
nificar un problema estético. Aun con esta
conducta agresiva, la tasa de recurrencia
TRATAMIENTO es del orden de 10-38%.
7. El drenaje de abscesos pequeños, meno-
Basado en que la mastitis es una infección res de 2,5 cm, también puede hacerse por
del tejido mamario y no de la leche no se debe punción percutánea, directa o dirigida por
dejar de amamantar al niño, por lo cual el ma- ultrasonografía. Bajo ultrasonografía se usa
nejo básico es: una aguja de calibre entre 25 y 18, y pue-
de dejarse un catéter 5 F de drenaje, aun-
1. Aplicación de calor húmedo 3-5 minutos que esto no es obligatorio. La punción per-
antes de amamantar. cutánea, que es un procedimiento ambula-
2. Masajes en forma circular en la zona afec- torio, causa menos molestia y dolor que el
tada con dirección al pezón para tratar de drenaje quirúrgico tradicional. En algunos
eliminar la obstrucción y si no puede ma- casos se requieren punciones repetidas y
mar el bebé por problemas de éste o por los más rebeldes y mayores de 2,5 cm pue-
mucho dolor de la madre, realizar la extrac- den requerir de todos modos drenaje qui-
ción manual de la leche en la forma antes rúrgico.
descrita o con medios mecánicos y con una 8. Suspender la lactancia solamente cuando
frecuencia igual a como si se estuviera se evidencie contaminación de la leche con
amamantando al recién nacido. el material purulento o por proximidad del
3. Apoyo a una correcta técnica de amaman- pezón al sitio de drenaje. Es necesario con-
tamiento, iniciando en forma preferencial tinuar con extracción manual de la leche.
con el seno afectado.
4. Hidratación adecuada de la madre y anal-
gésicos según necesidad. REFERENCIA
5. Con la sospecha de infección se inicia tera- Y CONTRARREFERENCIA
pia con antibióticos del tipo penicilina resis-
tentes a la penicinilasa como dicloxacilina El primero y segundo nivel deben manejar la
en dosis de 25-50 mg/kg/día que para una asesoría en las técnicas de amamantamiento
paciente promedio se repartirían en una e iniciar en los casos correspondientes la tera-
cápsula de 500 mg cada 6 horas o dos cada pia antibiótica que es de tratamiento ambula-
12 horas. En caso de reacción alérgica a torio.
las penicilinas se administra cefalexina 500
mg cada seis horas o eritromicina tabletas Remitir a los centros asistenciales de 2° y 3er
de 500 mg cada 6 horas. Casos con esca- nivel que cuenten con quirófanos para practi-
sa respuesta se formularán con base a los car el drenaje adecuado de los abscesos.
cultivos y antibiogramas.
6. Ante la evidencia de un absceso mayor (≥3
cm), clásicamente se practica drenaje bajo PRONÓSTICO
anestesia general tratando de romper las
loculaciones en forma digital. Se deja un El pronóstico es muy bueno cuando se toman
dren de Penrose, completando el trata- las medidas anteriormente mencionadas

922
CAPÍTULO XIII: MASTITIS PUERPERAL

conservando la calidad de la lactancia en be- 4. Lavado de manos del personal que atien-
neficio del recién nacido. Si se mantienen las de salas de neonatos.
técnicas adecuadas de lactancia las recidivas 5. Implementar técnicas de extracción manual
son escasas y las complicaciones a largo pla- cuando se suspenda temporal o definitiva-
zo se relacionan con drenajes inadecuados mente la lactancia.
de abscesos mamarios o sobreinfecciones con 6. Ayuda con medios físicos y farmacológicos
gérmenes nosocomiales que son de tórpida a las madres que no van a amamantar.
evolución.

PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN LECTURAS RECOMENDADAS


1. Desde el control prenatal, enseñar a las 1. Hook GW, Ikeda DM. Treatment of breast
mujeres embarazadas, con más énfasis en abscesses with US-guided percutaneous needle
las primigestantes, las diferentes técnicas drainage without indwelling catheter placement.
de lactancia y de preparación de pezones Radiology 1999; 213:579-582.
para evitar grietas y lesiones que son fo- 2. Pardo G. Lactancia Materna. Editorial Trazo Ltda.
cos de contaminación. Bogotá, 1996.
3. Schwarz RJ, Shrestha R. Needle aspiration of
2. Iniciar la lactancia antes de las dos horas
breast abscesses. Am J Surg 2001; 182:117-119.
post-parto. 4. Sweet R. Infectious Disease of the Female Geni-
3. Lavado de manos de la madre con agua y tal Tract. Third Edition. Williams and Wilkins.
jabón previos al amamantamiento. Baltimore, 1995.

923
CAPÍTULO I: INMOVILIZACIONES ORTOPÉDICAS

CAPÍTULO I

Inmovilizaciones ortopédicas

José Mario Pimiento, MD


Residente de Cirugía Hospital St. Mary’s
Wasterbury, USA

Rodrigo Pesantez, MD
Departamento de Ortopedia
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l trauma es la cuarta causa de muerte en


Estados Unidos, con cerca de 100,000
muertes por año; al analizar el trauma ortopé-
No es objetivo de la actual guía el evaluar la
inmovilización por trauma raquimedular, tema
que es tratado en otra guía de esta misma
dico en general, se ve que raramente compro- serie.
mete la vida, pero que puede poner en peli-
gro la viabilidad de las extremidades y gene-
rar secuelas e incapacidad importantes. DEFINICIÓN
Los conceptos sobre la fisiopatología del trau- La inmovilización es la prevención del despla-
ma han avanzado mucho, y también la tecno- zamiento de un hueso o de una articulación
logía de los manejos ortopédicos. Actualmen- lesionada mediante la utilización de otro seg-
te las lesiones ortopédicas son más comple- mento anatómico, una férula o un yeso.
jas, especialmente por razón del transporte
masivo y sus altas velocidades, lo cual signi- PRINCIPALES LESIONES ORTOPÉDICAS
fica un reto diario en la práctica clínica y en la
atención de urgencias. Esguince: lesión de las fibras ligamentosas.
• Grado I: desgarro leve de las fibras. Sin
El manejo de estas lesiones pertenece al cam- pérdida de función.
po de los servicios de emergencia y requiere el • Grado II: ruptura parcial del ligamento. Al-
conocimiento suficiente de la patología, así co- teración de la estabilidad articular.
mo la capacitación en las técnicas de inmovili- • Grado III: daño completo del ligamento,
zación por parte de los médicos de urgencias. pérdida de la estabilidad articular.

El objetivo de esta guía es revisar las lesio- Luxación: ruptura de ligamentos y cápsula
nes ortopédicas básicas y las indicaciones de articular. Implica la pérdida de contacto entre
inmovilización, sus técnicas fundamentales y las superficies articulares. Su reducción debe
sus posibles complicaciones, para permitir al ser pronta para evitar el daño vascular en la
médico de urgencias su adecuado manejo y superficie articular.
generar mejor calidad en la atención.

927
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Fractura: solución de continuidad de un hue- • Según su tipo:


so. Se asocia con alteraciones de los tejidos Incompletas: “leño verde”, compresión.
blandos adyacentes. Se puede clasificar des- • Completas: pueden ser:
de diferentes perspectivas: transversal, oblicua, espiral, conminuta.
• Según su etiología: • Relación con medio ambiente.
- Patológicas: enfermedad ósea. - Cerrada: no hay comunicación entre el
- Por fatiga: trauma repetido. hueso fracturado y el medio ambiente.
- Causa externa: puede ser directa o in- - Abierta: el hueso fracturado se comuni-
directa. ca con el medio ambiente. Tabla 1.
- Causa interna: contracción violenta
muscular.

TABLA 1. CLASIFICACIÓN DE LAS FRACTURAS ABIERTAS


Tomada de: Morris JM, Bickenstaff LP. Fatigue Fractures, Sprigfield III, 1967

Tipo I Tipo II Tipo III *


Tamaño de la herida < 1 cm >1 cm a 10 cm >10cm
Daño de los tejidos Mínimo Moderado Desvitalización de tejidos
blandos
*Cualquier fractura abierta por arma de fuego de alta A B C
velocidad, fractura en campo abierto, segmentaria, con Suficientes tejidos Pérdida masiva de Daño vascular que
compromiso vascular, o por aplastamiento, sin importar blandos para cubrir tejidos blandos, necesita reparación,
la longitud de la herida se considera grado III. el hueso. Poca daño perióstico. contaminación
contaminación. Mayor contami- severa.
nación.

EVALUACIÓN CLÍNICA dico y quirúrgico, mecanismo del trauma y


severidad, así como las limitaciones fun-
En el evento de urgencia se debe mantener el cionales asociadas. El dolor es un síntoma
esquema de evaluación y manejo inicial del trau- cardinal que debe investigarse en detalle.
ma, según el método ATLS del Colegio Ame- Es importante preguntar sobre el tratamien-
ricano de Cirujanos: la prioridad es la estabiliza- to inicial y la respuesta al mismo.
ción del paciente; posteriormente se procede con • Paciente con traumatismo múltiple: gene-
el tratamiento de las lesiones ortopédicas. ralmente traído a la institución por paramé-
dicos. Si el paciente está en capacidad de
Existen dos escenarios clínicos: responder, se realiza anamnesis completa
• Paciente con lesión ortopédica leve: gene- con el fin de conocer los antecedentes y
ralmente asiste a la consulta por sus pro- condiciones patológicas, factores que pue-
pios medios, con lesiones que pueden ser den modificar el manejo así como alertar
traumáticas leves o relacionadas con su ac- sobre posibles complicaciones. En las si-
tividad deportiva. Es importante una anam- tuaciones en las que el paciente, por su
nesis completa que incluya antecedentes, estado clínico, no pueda proveer informa-
condiciones patológicas, tratamiento mé- ción suficiente, se debe interrogar a los

928
CAPÍTULO I: INMOVILIZACIONES ORTOPÉDICAS

paramédicos que realizaron la estabiliza- • Analgesia.


ción en el sitio del evento acerca del me- • Mantener las reducciones óseas para con-
canismo del trauma, severidad del mismo solidación.
y el manejo dado inicialmente. • Reducción ósea para transporte.
• Disminuir daño tisular.
En el examen físico el primer paso es la ob- • Permitir la reparación de tejidos blandos.
servación de los segmentos corporales en bus- • Disminuir complicaciones de las lesiones.
ca de deformidades, acortamiento de las ex-
tremidades, posiciones antálgicas. Se continúa Para proceder con la inmovilización, se deben
con la palpación, buscando el área lesionada retirar objetos como anillos, pulseras, relojes,
por dolor o imposibilidad de cumplir su función para evitar lesiones por presión externa.
y se exploran los espacios articulares en bus-
ca de acumulación de fluido. Se procede a eva- TIPOS DE INMOVILIZACIÓN
luar la movilidad de los arcos articulares bus-
cando limitaciones, y se identifican signos es- 4. Vendajes: elementos de lienzo o de otros
pecíficos para lesiones articulares. materiales utilizados como elástico para la
sujeción de segmentos anatómicos.
Es fundamental evaluar la integridad del pa- • En ocho: utilizado para las fracturas clavicu-
quete neurovascular. El estado del componen- lares, da soporte a la fractura sin interferir
te vascular se define palpando los pulsos y con los movimientos del hombro.
determinando el estado de la perfusión distal, • Con Tensoplast®: puede ser utilizado para
y el neurológico discriminando la función mo- la inmovilización de esguinces de tobillo
tora y la sensitiva. Todo esto con anterioridad grado I o II.
a realizar cualquier tipo de manipulación de • El vendaje bultoso puede ser utilizado en
la lesión. esguince de rodilla sin lesión ligamentosa.
• Se puede inmovilizar una extremidad con
Exámenes paraclínicos. Se recomienda rea- su par anatómico sano para disminuir el
lizar radiografías según el diagnóstico presun- movimiento y el desplazamiento.
tivo, para observar la simetría de la articula-
ción y el hueso. Se toman dos proyecciones, 5. Cabestrillo: es utilizado en lesiones del
preferiblemente perpendiculares, que deben miembro superior o clavícula.
involucrar la articulación superior y la inferior Puede ser de dos tipos.
al segmento comprometido. Base triangular ancha que sostiene el peso
de la extremidad. Es usado principal men-
te en fracturas de clavícula o luxaciones
OBJETIVOS DE LA INMOVILIZACIÓN de hombro.

La inmovilización tiene diferentes objetivos Se necesita un triángulo de 1,5 metros de an-


pertinentes a la patología específica en cada cho en la base y 90 centímetros de largo por
paciente. En algunos casos es el tratamiento cada lado. Si el cabestrillo es para un niño, se
definitivo, en otros es parte del manejo prequi- reduce el tamaño según la edad.
rúrgico y busca reducir el dolor e incomodi-
dad generado por la lesión: Se coloca el codo del paciente en el extremo
superior del triángulo y la muñeca en la mitad
a lo largo del fondo del lado opuesto del mis-

929
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

mo. Luego se atan en el hombro del mismo • Algodón laminado.


lado o en el hombro opuesto los dos extremos • Vendaje elástico.
libres del triángulo. Se ajusta la altura del nudo • Esparadrapo de tela o Transpore®.
de tal manera que el codo quede flexionado
en el ángulo correcto. PROCEDIMIENTO

Existen en el mercado cabestrillos hechos en • Primero se mide la longitud deseada se-


plástico en diferentes tallas. gún el segmento comprometido; la resis-
tencia se da según las capas del mismo
Colgante: se usa en fracturas de brazo para • Se deja inmersa en agua tibia por unos
que la gravedad se encargue de mantener la segundos.
reducción. Se crea un aro alrededor de la mu- • Se retira el exceso de agua.
ñeca del miembro comprometido y se lo sos- • Se cubre el yeso con algodón laminado
tiene con un vendaje de gasa al cuello del pa- para evitar la irritación de la piel por el con-
ciente. tacto directo.
• Se adosa sobre la piel, manteniendo la
6. Férula: de diversos materiales como polie- posición anatómica deseada.
tileno, y las hay enyesados y de malla: Bus- • Se aplica una capa de vendaje elástico, con
can dar soporte parcial a la extremidad y presión leve, para moldearla adecuada-
limitar sus movimientos. Se puede utilizar mente.
en esguinces de las extremidades, como • Evite las zonas de presión.
tratamiento provisional antes de algunas
fracturas. 7. Enyesado circular: es una tela impregna-
da de sulfato de calcio semihidratado, que
PRINCIPIOS Y REQUISITOS BÁSICOS PARA al contacto con el agua se endurece. Se
LA APLICACIÓN DE FÉRULAS mide el ancho en pulgadas y el largo en
pies. Su uso en urgencias se limita al tra-
• En caso de fracturas se inmovilizan tanto tamiento de fracturas que no pueden ser
la articulación inferior como la superior para manejadas con férula como las de tibia o
limitar la movilidad. las fracturas en niños.
• Se debe mantener la reducción anatómica
de la fractura. Su nomenclatura se basa en los segmentos
• Se deben cubrir dos terceras partes de la anatómicos que compromete, como el bra-
circunferencia del segmento comprometido. quiopalmar y el ínguinopedio, entre otros.
• Se utilizan 8-10 capas de yeso para miem-
bro superior, y 10-14 capas para miembro REQUISITOS
inferior, a fin de lograr suficiente resistencia.
• Experiencia e idoneidad en la realización del
MATERIALES procedimiento para evitar complicaciones.
• Dar instrucciones y advertir sobre signos
Los materiales dependen de la férula que se de alarma posteriores a la realización del
va a construir. procedimiento.
• Guantes desechables no estériles.
• Vendaje enyesado.
• Platón con agua tibia.

930
CAPÍTULO I: INMOVILIZACIONES ORTOPÉDICAS

ANESTESIA • Se reevalúan el pulso y la sensibilidad, y


se interroga al paciente sobre dolor o inco-
Infiltración local en el foco de fractura para modidad con el enyesado.
disminuir el dolor durante la manipulación en • Se imparten instrucciones precisas al pa-
la reducción cerrada. Utilizar xilocaína al 1% ciente.
ó al 2% con epinefrina en dosis terapéuticas.

MATERIALES INSTRUCCIONES AL DAR DE ALTA


AL PACIENTE
Los materiales dependen del enyesado que
se va a hacer. • Mantener la extremidad elevada.
• “Estoquineta” o malla tubular. • Movilidad de segmentos libres.
• Algodón laminado. • Consultar inmediatamente si hay dolor, pa-
• Vendaje enyesado corriente o de fraguado restesias, disestesias, edema o cianosis.
extrarápido o de sintéticos (fibra de vidrio, • Asistir a control según indicaciones.
polietileno, plastazote, etc.,) según nece-
sidad.
• Platón con agua tibia. COMPLICACIONES
• Tacones plásticos según necesidad. DE LA INMOVILIZACIÓN
PROCEDIMIENTO Las complicaciones inherentes a las lesiones
ortopédicas se pueden presentar inmediata-
• Se protege el segmento comprometido con mente después de la inmovilización y deben
“estoquineta” o malla tubular. ser reconocidas y manejadas en forma rápi-
• Se aplica una capa de algodón laminado, con da y expedita:
mayor protección en las prominencias óseas.
• Se sumerge el vendaje enyesado en agua Hemorragia: en casos de fracturas abiertas
tibia hasta que deje de burbujear. se presenta sangrado externo que puede com-
• Se retira el exceso de agua, exprimiéndolo prometer el estado hemodinámico del pacien-
con presión leve y sin retorcerlo. te, factor que se debe tener muy en cuenta al
• Se aplica el vendaje enyesado sobre el planear el traslado de un paciente con este
miembro, sin tensión y evitando pliegues, tipo de fracturas.
arrugas o bordes irregulares. Generalmen-
te se aplican de 4 a 6 capas, pero se au- Lesión vascular: debido a la localización ana-
mentan o se reducen según las necesida- tómica, en las lesiones óseas, se pueden pre-
des de cada paciente. sentar lesiones vasculares asociadas. Es pro-
• Se frota el yeso para distribuirlo uniforme- minente el caso de las lesiones de rodilla que
mente. Se puede realizar un mejor acaba- pueden asociarse a compromiso de la arteria
do si se dobla la “estoquineta” o la malla poplítea, con el riesgo alto de isquemia en la
en los bordes. extremidad afectada. Es fundamental realizar
• Se deja secar por 10-20 minutos. un adecuado examen físico previo a la mani-
• No se debe apoyar por 24 horas para per- pulación de lesiones ortopédicas descartando
mitir que fragüe completamente. Se incor- compromiso vascular, debido a que se gene-
pora, según su necesidad, un tacón para ra la urgencia inmediata de reestablecer el
los enyesados de miembro inferior. riego arterial. Revise el aporte vascular a la

931
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

extremidad después de la reducción o inmo- Trombosis venosa profunda: el trauma orto-


vilización de la lesión. pédico genera un aumento en el riesgo de esta
patología, aunado al aumento del mismo por
Lesión neurológica: las consideraciones ana- la inmovilidad del paciente. En pacientes que
tómicas son las mismas que para lesión por su condición son sometidos a inmoviliza-
vascular. La lesión neurológica puede ser par- ción prolongada debe considerarse el uso de
cial o completa; el sistema nervioso periférico heparinas de bajo peso molecular.
puede recuperar parcial o totalmente sus défi-
cits en virtud a las propiedades intrínsecas de Embolismo pulmonar: es secundario a la
las células de Schwann. En el examen físico trombosis venosa profunda.
inicial se debe explorar la integridad neurológica
del segmento afectado para definir y registrar Atelectasias/neumonía: la inmovilidad disminu-
algún tipo de déficit. Posterior a la inmoviliza- ye el volumen corriente, lo que genera zonas
ción se debe revisar la integridad neurológica, pulmonares que no son debidamente expandi-
debido a la posibilidad de un atrapamiento ner- das, las cuales pueden convertirse en atelecta-
vioso en la reducción, lo cual indicaría cirugía sias y aumentar el riesgo de neumonía. Su ma-
de urgencia para la descompresión. nejo consiste en terapia respiratoria y en pro-
mover la movilización temprana del paciente.
Síndrome compartimental: en las extremida-
des se hallan diversos espacios limitados por Desgaste muscular y desacondicionamien-
las fascias inextensibles de los músculos. Den- to físico: resultan de la inmovilidad, y puede
tro de estos compartimientos se encuentran legar a extremos de verdadera incapacidad
estructuras musculares, vasculares y nervio- que requiere programas intensos de rehabili-
sas. Cuando se presenta una agresión como tación.
isquemia, sangrado, reperfusión o trauma que
aumente la presión intersticial dentro de este Lesiones propias de los métodos de inmo-
espacio inexpandible, resultan comprometidas vilización ortopédica: existen complicacio-
las estructuras en su interior. Esto se denomi- nes que son muy particulares del tratamiento
na síndrome compartimental, el cual se mani- ortopédico, y que varían según el carácter de
fiesta inicialmente por dolor en reposo que es la lesión original y el método de inmoviliza-
exacerbado con la movilización pasiva; si no ción empleado.
es tratado oportunamente, aparecen signos
de daño del tejido nervioso (disestesias y pa- Úlceras por presión: la aplicación inadecua-
restesias), tejido muy sensible a los cambios da de una férula o yeso puede generar zonas
en la presión; finalmente se establece el com- de presión que ulceren el tejido subyacente y
promiso vascular con isquemia, hipoxia y ano- generen esta complicación. Para prevenirlas
xia que genera daño irreversible en los teji- se debe tener máximo cuidado en la coloca-
dos musculares. La sospecha clínica debe ser ción de yesos o férulas, y se debe estar siem-
alta debido a la elevada morbilidad asociada pre atento a cualquier reporte de molestia o
con este síndrome. El manejo debe ser la dolor por parte del paciente.
fasciotomía inmediata.

Otras complicaciones son generadas directa-


mente por la inmovilidad causada por el trau-
ma y la inmovilización:

932
CAPÍTULO I: INMOVILIZACIONES ORTOPÉDICAS

LECTURAS RECOMENDADAS Marx, RS Hockberg, RN Walls. 5th edition. Mosby


Inc. St. Louis, 2002.
1. American College of Surgeons. ATLS, Programa 7. Guía de manejo: Esguince de Rodilla. Fundación
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi- Santa Fe de Bogotá. Bogotá marzo 31 de 2002.
cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole- 8. Gustilo R, Mendoza R, Williams DN. Problems in
the management of type III (severe) open fractu-
gio Americano de Cirujanos, Chicago, 1997.
res. J Trauma 1984; 24:742-746.
2. Azar FM, Pickering RM. Traumatic Disorders En:
9. Kock HJ, Schmit-Neuerburg KP, Hanke J, et al.
Campbell’s Operative Orthopaedics. Editado por
Thromboprofilaxis with low-molecular-weight
ST Canale. 9th edición. Mosby Inc. St. Louis,1998.
heparin in outpatients with plaster-cast immobilisa-
3. Borman TR. Bedside orthopedic procedures. Crit tion of the leg. Lancet 1995; 346:459-451.
care Clin 2000; 16:131-149. 10. Skiner H. Current Diagnosis and Treatment of
4. Burgos J. Fracturas. Cirugía ortopédica y trauma- Orthopedics. 2 da Edicion. Appleton & Lange.
tología. Panamericana. Bogotá, 1999. Narwalk, 2000.
5. Echeverri A, Gerstner J. Conceptos en Trauma-
tología. 2da edición. Feriva SA. Cali, 1997. INTERNET
6. Geiderman JM. General principles of orthopedic Enciclopedia médica en español. Cómo hacer un ca-
injuries. En: Rosen’s Emergency Medicine: bestrillo .www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/
Concepts and Clinical Practice. Editado por JA article/000017.htm

933
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO II

Dolor lumbar agudo

Claudia Campos, MD
Jefe Departamento de Rehabilitación
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN FISIOPATOLOGÍA

S e conoce como dolor lumbar agudo, aquel


que está localizado en el área compren-
dida entre la reja costal inferior y la región
La etiología del dolor lumbar es muy comple-
ja. Dentro de las estructuras sensibles al do-
lor se encuentran: raíces nerviosas, durama-
sacra, y que en ocasiones, puede comprome- dre, ligamentos longitudinal anterior y poste-
ter la región glútea, cuya duración es menor rior, fibras anulares externas del disco, articu-
de 6 semanas. laciones facetarias y hueso poroso.

Un gran porcentaje de pacientes tiene lo que El dolor lumbar se ha asociado durante mucho
se denomina “lumbociática”. En este caso el tiempo con alteraciones mecánicas en la es-
dolor se irradia distalmente a uno de los miem- tructura de la columna. Sin embargo, desde
bros inferiores, correspondiendo a la distribu- 1951 con los estudios de Lindahl y Rexed,
ción de las raíces nerviosas lumbosacras, con quienes reportaron inflamación histológica en
o sin déficit sensitivo o motor. las raíces nerviosas de pacientes operados
por ciática, se ha logrado identificar que el
componente bioquímico es un factor principal
EPIDEMIOLOGÍA en la etiología del dolor lumbar. Saal y asocia-
dos reportaron altos niveles de fosfolipasa A2
El dolor lumbar es la segunda causa más co- entre el espacio epidural y el material de la
mún de consulta al médico. Su incidencia en hernia discal en pacientes con radiculopatía,
la población adulta es de 60% a 90% con 5 % y luego Chen y asociados demostraron que
de incidencia anual. En menores de 45 años la inyección de la fosfolipasa A2 en el espacio
es la primera causa de discapacidad. epidural produce desmielinización de áreas de
hipersensibilidad en las raíces nerviosas y
De todas las causas de dolor lumbar agudo, descargas ectópicas responsables de la
el 70% es debido a desgarros musculares lum- ciática.
bares, el 10% a cambios degenerativos en los
discos y las facetas, el 4% a fracturas por com- Cargas constantes, cíclicas o vibratorias, in-
presión osteoporótica, y el 3% a estenosis ducen laxitud y microtrauma en las estructu-
espinal. El resto de causas representa el 1% ras viscoelásticas de los elementos espinales.
únicamente.

934
CAPÍTULO II: DOLOR LUMBAR AGUDO

El concepto de degeneración biomecánica en • Descripción del dolor.


espiral ha ganado mucha aceptación. Este su- • Factores desencadenantes y calmantes.
giere que el daño anular (fisura, desgarro o • Limitaciones por el dolor.
herniación) produce liberación de material nu- • Síntomas urinarios, debilidad, hipoestesias.
clear (fosfolipasa A2 y glutamato) en el espa- • Síntomas constitucionales: fiebre, pérdida
cio epidural y las raíces nerviosas, provocan- de peso, dolor nocturno.
do una reacción inflamatoria con estimulación • Cirugía lumbar previa con dolor persistente.
nociceptiva, posible daño nervioso y finalmen- • Antecedente de inmunosupresión, cáncer,
te dolor. Las neuronas se sensibilizan a más corticoesteroides, HIV.
estímulo mecánico, posiblemente causando • Uso de drogas ilícitas intravenosas.
isquemia, atrayendo polimorfonucleares y • Tabaquismo.
monocitos a las áreas afectadas y producien- • Ocupación.
do más degeneración discal y más dolor.

EXAMEN FÍSICO
CUADRO CLÍNICO
1. Inspección postura, marcha.
El interrogatorio debe incluir los siguientes 2. Examen regional de la columna lumbar pal-
puntos: pación espinal, arcos de movimiento, ca-
deras y miembros inferiores.
• Mecanismo insidioso o trauma específico. 3. Exámenes específicos: Lasegue.
• Localización de los síntomas. 4. Examen neurológico de tamizaje: fuerza
• Duración aguda (menos de 6 semanas) o muscular, sensibilidad atrofia, reflejos.
crónica (mas de 6 semanas). 5. Examen abdominal, pulsos, pelvis.

TABLA 1. EXAMEN MOTOR

Raíz nerviosa Examen motor Prueba funcional


L3 Extensión de cuádriceps Acuclillarse y levantarse
L4 Dorsiflexión de pie Caminar en talones
L5 Dorsiflexión de grueso artejo Caminar en talones
S1 Plantiflexión de pie Caminar en puntas de pie

TABLA 2. EXAMEN SENSITIVO Y REFLEJOS

Raíz nerviosa Sensibilidad Reflejo


L3 Muslo lateral, cóndilo femoral medial Patelar
L4 Pierna medial y tobillo medial Patelar
L5 Pierna lateral y dorso del pie Isquiotibial
S1 Planta del pie y tobillo lateral Aquiliano

935
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

AYUDAS DIAGNÓSTICAS En caso de signos de alerta, las radiografías


lumbares deben ser AP y laterales, sin nece-
En la valoración de urgencias no está indica- sidad de oblicuas.
do el uso de ayudas diagnósticas a menos
que exista sospecha de cáncer, infección, sín- La decisión de ordenar resonancia magnéti-
drome de cauda equina, fractura, hernia discal ca nuclear, TAC de columna, gamagrafía ósea
significativa o aneurisma aórtico. se debe tomar en conjunto con el especialista
de columna.

A. Indicaciones de imágenes diagnósticas y/ o interconsulta especializada

Condición “Signo de alerta” Acción


Cáncer Antecedente de cáncer Imágenes diagnósticas
Perdida de peso inexplicada
Edad mayor de 50
No hay mejoría a pesar del tratamiento
Dolor más de 6 semanas
Dolor en reposo, nocturno
Infección Fiebre Imágenes diagnósticas + Hemograma,
Antecedente de uso ilícito de drogas intravenosas velocidad de sedimentación, parcial
Infección bacteriana reciente de orina
Estados de inmunosupresión (corticoesteroides,
trasplantados, diabetes, VIH)
Dolor en reposo
Cauda equina Retención urinaria o incontinencia Interconsulta quirúrgica especializada
Anestesia perineal urgente + imágenes diagnósticas
Tono esfínter anal disminuido/ incontinencia fecal
Debilidad bilateral en miembros inferiores / hipo-
estesias o déficit neurológico progresivo
Fractura Uso de corticosteroides Imágenes diagnósticas e interconsulta
Edad mayor de 70 años o antecedente de osteo- quirúrgica especializada
porosis
Trauma significativo reciente
Aneurisma abdominal Masa abdominal pulsátilo Imágenes diagnósticas e interconsulta
Enfermedad vascular quirúrgica especializada
Dolor en reposo o nocturno
Edad mayor de 60
Hernia discal Debilidad muscular mayor Interconsulta al especialista de columna
significativa e imágenes diagnósticas

Adaptado de Kaiser Permanente, 1996.

936
CAPÍTULO II: DOLOR LUMBAR AGUDO

INDICACIONES DE HOSPITALIZACIÓN debe continuar en el paciente con lumbalgia


con o sin ciática.
Tres grupos:

A. Sospecha de trauma mayor agudo: el trau- TRATAMIENTO INTERDISCIPLINARIO


ma ocurrió 7 días antes de la consulta, o el
examinador documenta o sospecha una El manejo inicial del dolor lumbar agudo debe
fractura espinal aguda, lesión medular o estar a cargo del médico general o del urgen-
daño a la raíz nerviosa. ciólogo, una vez descartadas las patologías
B. Déficit neurológico agudo o progresivo: de alerta. Cuando el paciente no mejora des-
contactar al especialista de columna antes pués de la valoración inicial, se debe remitir
de ordenar imágenes diagnósticas. Si las para un tratamiento especializado.
imágenes no demuestran lesión aguda se
puede dar manejo ambulatorio u hospitali- Según la etiología del dolor lumbar el trata-
zar para facilitar la decisión quirúrgica, ob- miento especializado varía.
servación del déficit neurológico o para re-
habilitar los déficits funcionales. La deci- El tratamiento de la lumbalgia con radiculopa-
sión de hospitalización se toma en conjun- tía por herniación discal con bloqueos transfo-
to con el especialista de columna. raminales selectivos con corticoides es un
C. Dolor lumbar incapacitante. El paciente no método que reduce el dolor y que puede evi-
puede realizar sus actividades básicas por tar el manejo quirúrgico de estos pacientes.
el dolor y vive solo. Dependiendo de la institución, este procedi-
miento es realizado por diferentes especialis-
tas como neurocirujanos, fisiatras, radiólogos,
TRATAMIENTO INICIAL anestesiólogos, etc.

Múltiples manejos farmacológicos y manuales Solo 3% de las lumbalgias tienen indicación


se han propuesto para el manejo agudo del quirúrgica.
dolor lumbar. En primera línea se recomienda
el uso de antiinflamatorios no esteroideos si Los factores psicológicos del paciente deben
no hay contraindicaciones. Los relajantes ser valorados por un especialista en casos
musculares y el uso de opiáceos también es- específicos.
tán indicados en los casos de mayor dolor y
limitación. Los programas de fortalecimiento de la mus-
culatura espinal y estabilización de la columna
Las manipulaciones manuales no tienen indi- son la base de los programas de rehabilitación.
cación en el tratamiento agudo del dolor lum- Estos han demostrado ser efectivos en el tra-
bar. Las modalidades como la crioterapia, ca- tamiento de la enfermedad degenerativa discal.
lor superficial, TENS, sirven como coadyuvan-
tes en el manejo del dolor.
PRONÓSTICO
La prescripción de actividad no está aún clara-
mente definida, aunque parece ser que el re- 90% de los pacientes con lumbalgia aguda
poso absoluto trae más complicaciones que mejoran en menos de 4 semanas y no nece-
beneficios, y que el nivel de actividad usual sitan manejo especializado.

937
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La situación laboral del paciente juega un pa- LECTURAS RECOMENDADAS


pel primordial en el curso clínico de la lumbal-
gia. Se ha demostrado que el paciente que 1. Cannon D, Aprill C. Lumbosacral epidural steroid
está descontento en su trabajo tiene menos injections. Arch Phys Med Rehabil 2000; 81: S-
probabilidades de mejoría. 87-S-98
2. Bloomington (MN): Adult low back pain. Institute
for Clinical Systems Improvement (ICSI); Low back
pain guidelines 2001 May.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN 3. Hagen K, Hilde G, Jamtvedt G, Winnem M. The
Cochrane Review of Advice to Stay Active As a
Las “escuelas de columna e higiene postural” Single Treatment for Low Back Pain and Sciatica.
no han demostrado ser eficientes en la pre- Spine 2002; 27:1736-1741.
vención del dolor lumbar. 4. Londoño R. Dolor lumbar agudo: guia practica
clinica. Rev Colomb Ortop Traumatol 2001; 15:
34-36.
La obesidad no está relacionada con la lum-
5. Washington State Department of Labor and
balgia. Industries. Guidelines for hospitalization for low
back pain. Olympia (WA): Washington State
Ciertos ambientes laborales pueden causar Department of Labor and Industries; 1999.
trauma repetitivo en las estructuras espinales
y estos se deben modificar.

938
CAPÍTULO III: RADICULOPATÍA LUMBAR

CAPÍTULO III

Radiculopatía lumbar

María de los Ángeles Roversi, MD


Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Facultades (Escuelas) de Medicina

José Nel Carreño, MD


Ex-jefe del Servicio de Urgencias
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a columna vertebral, está formada por 33


estructuras óseas. La unidad funcional es-
ta compuesta por dos vértebras adyacentes
degeneración del disco es indolora mientras
no se afecte el anillo fibroso.

separadas por un disco, con los ligamentos y


músculos paravertebrales que la envuelven. ETIOLOGÍA
El segmento anterior de la columna vertebral Con el envejecimiento, se origina degenera-
es en esencia una estructura de soporte y el ción del disco intervertebral y del ligamento
segmento posterior contiene y protege estruc- longitudinal, mediado por la deshidratación,
turas nerviosas a la vez que suministra sitios que provoca perdida de la altura del disco. A
donde se pueden fijar los ligamentos y mús- lo anterior se suman los microtraumas repeti-
culos. La parte articular dirige los movimien- dos. Estos pueden ser tanto compresiones
tos de esta estructura. axiales (como sucede con los deportistas co-
mo parapentistas) o, lo que es mas frecuente,
Los discos intervertebrales, actúan como es- traumas en flexo-extensión. La flexión forzada
tructuras hidráulicas que amortiguan el impac- genera compresión anterior del disco lo cual
to entre vértebras. Se componen de una par- presiona el núcleo pulposo hacia atrás. Si la
te central denominada núcleo pulposo, rema- región posterior del anillo fibroso está debili-
nente embriológico de la notocorda, y com- tada o desgarrada, la flexión permite la extru-
puesto en un 80% por agua, su consistencia sión del anillo pulposo a través del defecto de
cartilaginosa, que representa dos tercios del continuidad. El disco puede entonces herniar-
mismo, carece de inervación y presenta una se en dirección lateral, central o centrolateral.
presión 5-15 veces superior a la presión arte-
rial. La función del núcleo pulposo es brindar Existen diversos grados de hernia del disco
cierta movilidad. El anillo fibroso cubre el nú- intervertebral, lo cual tiene importancia desde
cleo pulposo, es más grueso en el segmento el punto de vista clínico y terapéutico:
anterior por lo que la ruptura posterior es mas 1. Protrusión, cuando hay ruptura de algunas
frecuente. Tiene inervación, por lo tanto la fibras internas del anillo fibroso, el cual se

939
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

hace incompetente y se abomba hacia La mayor parte de los dolores lumbares son
atrás. No es frecuente encontrar compre- inespecíficos y curan por si solos. Sin embar-
sión radicular. go, el ausentismo laboral, genera anualmen-
2. Extrusión subligamentaria cuando hay rup- te pérdidas económicas millonarias.
tura del anillo fibroso, con salida hacia atrás
del núcleo pulposo, el cual todavía es rete- La radiculopatía lumbosacra constituye el
nido por el ligamento longitudinal posterior grueso de esta patología y se calcula que 7-9
intacto. de cada 10 pacientes la presentan en la región
3. Extrusión extraligamentaria con ruptura del lumbar. Aproximadamente 12 millones de es-
ligamento longitudinal posterior. Permite tadounidenses padecen de enfermedad dege-
que una parte del núcleo pulposo se pro- nerativa del disco.
yecte dentro del canal raquídeo.
4. Migración, cuando el núcleo pulposo ex- Los niveles mas comprometidos son especial-
truído queda libre dentro del canal y migra mente L4-5 y L5-S1. A diferencia de la radicu-
en sentido cefálico o caudal. lopatía cervical, las raíces lumbosacras pue-
den ser lesionadas no solo en su trayecto de
Las raíces nerviosas emergen del saco dural, salida del canal vertebral, sino también den-
tienen una trayectoria hacia abajo y hacia tro del mismo, para conformar el síndrome de
afuera y pasan por un espacio relativamente cauda equina. Además también es posible que
estrecho situado entre el cuerpo vertebral y el exista compromiso radicular bilateral.
disco intervertebral, por una parte, y la articu-
lación ínterfacetaría, por otra, antes de atra-
vesar el agujero de conjugación. CLÍNICA
Las raíces nerviosas, reciben el nombre según La mayoría de los cuadros de hernia lumbar,
la relación con el cuerpo vertebral que se en- son precedidos de episodios de dolor de es-
cuentre sobre ella, en otras palabras, la raíz palda con diferentes grados de duración y en
L4 está por debajo de L4 y superior a L5; por muchos casos el periodo de iniciación no pue-
esta razón la herniación del disco L4-L5, pro- de ser precisado.
duce daño la raíz nerviosa L5.
El término ciática es utilizado para el síndrome
Cuando se produce protrusión del disco, este doloroso que se localiza en el trayecto del ner-
espacio se reduce y comprime o irrita la raíz vio ciático. La tendencia actual es abandonar
del nervio adyacente. Este proceso es media- su uso y sustituirlo por el de radiculopatía.
do por isquemia e inflamación
El dolor es neuropático, causado por irritación
o compresión de una o mas raíces y se des-
EPIDEMIOLOGÍA cribe como urente, semejante a una corriente
eléctrica por el recorrido del nervio, acompa-
El dolor lumbar es un síntoma, no un diag- ñado de entumecimiento que irradia a la ex-
nostico y afecta al 70-80% de la población. tremidad inferior. La localización del dolor si-
La mayoría de los pacientes mejoran en dos gue la distribución del dermatoma de la raíz
semanas. Se calcula que al año 7% de la po- comprometida. El dolor mejora generalmente
blación adulta consulta al médico por este cuando el paciente esta en posición supina
motivo. con flexión de los miembros inferiores.

940
CAPÍTULO III: RADICULOPATÍA LUMBAR

Un cuadro bien desarrollado de prolapso de de la pierna, cara dorsomedial del pie y grueso
disco intervertebral se caracteriza por: artejo. Parestesias en el glúteo medio, glúteo
1. Postura corporal anómala menor, tensor de la fascia lata, tibial posterior,
2. Síndrome de dolor lumbar que se irradia a peroneos, extensor corto de los dedos, exten-
la extremidad (glúteo, muslo, pierna, pie). sor largo del hallux. El reflejo patelar y aquilia-
3. Presencia de trastornos sensitivos (pares- no no están comprometidos.
tesias o hipoestesia), motores (paresia o
plejía de los miotomas correspondientes) Radiculopatía S1: Dolor en región lumbar, glú-
e hipo o areflexia, dependiendo de la raíz tea, cara anterior del muslo y pierna. Trastor-
afectada. nos de sensibilidad en dedo V, cara lateral del
pie y planta del pie. Las paresias se presen-
De manera más especifica: tan en glúteo mayor, bíceps femoral, gastrone-
mio y soleo, flexor largo de los dedos, exten-
Radiculopatía L1: presenta dolor y trastornos sor corto de los dedos. El reflejo aquiliano se
de la sensibilidad en la región inguinal y even- ve comprometido.
tualmente paresia del músculo oblicuo inter-
no y transverso del abdomen. Puede afectar Radiculopatía S2-S5: Produce trastornos de
los reflejos cutáneos abdominales inferiores. sensibilidad en pierna, cara posterior del mus-
Es poco frecuente. lo, glúteo y región perianal. Eventualmente
trastornos musculares del esfínter anal y la
Radiculopatía L2: origina trastornos de la sen- vejiga, manifestado por alteración de la fun-
sibilidad en cara anterior del muslo con pare- ción excretora y eréctil en el hombre. El refle-
sias en pectíneo, ileopsoas, cuadriceps y jo cutáneo anal puede ser afectado.
aductores del muslo. El reflejo cremasteriano
puede estar afectado. En hernias discales grandes, se puede com-
prometer toda la cola equina y originar anes-
Radiculopatía L3: produce trastornos de la tesia perineal asimétrica con incontinencia uri-
sensibilidad en caras anterior e inferior del naria. Si son altas, como sucede tras fractu-
muslo y cara interna de la rodilla. Se presen- ras por estallido, pueden comprometer el cono
tan en forma variable parestesias en los mús- medular con un síndrome de cono caracteriza-
culos pectíneo, ileopsoas, cuadriceps y aduc- do por anestesia en silla de montar, alteración
tores del muslo. El reflejo patelar se ve afec- esfinteriana y sexual mas paraparesia
tado. espástica.

Radiculopatía L4: el dolor se presenta en re-


gión lumbar, glútea y cara antero-medial de la DIAGNÓSTICO
pierna con trastornos de sensibilidad en rodi-
lla y cara interna de la pierna. Parestesias se Es indispensable diferenciar la ciática de otros
presentan en cuadriceps, sartorio y tibial an- dolores de origen muscular u osteo-articula-
terior. El reflejo patelar se ve afectado. res, que pueden localizarse en las mismas
regiones.
Radiculopatía L5: el dolor se distribuye en re-
gión lumbar, glútea, cara lateral del muslo y Además de una historia clínica detallada, se
cara anterolateral de la pierna. Se presentan recomienda un examen físico completo con
cambios de sensibilidad en cara anterolateral una cuidadosa palpación abdominal y espe-

941
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cialmente en varones mayores de 50 años, lo y pierna con una extensión entre 35-45°.
complementar con tacto rectal. Debe hacerse Dolores posteriores en ángulos sobre los 45°
inspección, palpación y percusión de la co- no son conclusivas pues podría deberse a
lumna así como un cuidadoso análisis de la retracción de los músculos isquiotibiales. El
flexión, extensión, lateroflexión y evaluar la signo de Laségue positivo sugiere compresión
presencia de espasmo muscular. del nervio ciático, de las raíces lumbares cau-
dales o de las raíces proximales sacras.
El examen de columna debe comenzar con el
paciente en posición de pie. Se debe pedir Las variantes de la maniobra de Laségue se
que señale en su cuerpo la ubicación del do- conocen como:
lor, observar la postura corporal, pues el es-
pasmo de los músculos paravertebrales pro- Signo de Bragard: se realiza la maniobra de
duce disminución de la lordosis normal. Laségue y se finaliza ejerciendo dorsiflexión
del pie. La maniobra es positiva cuando se
La palpación de la columna es importante para exacerba o provoca dolor.
evidenciar puntos dolorosos sugestivos de
punto gatillo (como sucede en la fibromialgia), Signo de Scardi: se hace el Laségue y se fi-
periostitis (como sucede con las metástasis o naliza ejerciendo una dorsiflexión del grueso
las infecciones) y escalón entre L5 y S1 que artejo. La maniobra es positiva cuando se exa-
sugiere espondilolistesis. cerba o provoca dolor.

Además en decúbito prono, el dolor ocasiona Signo de Fajerstan: se efecúa la maniobra de


postura antálgica, caracterizada por flexión de Laségue en la extremidad libre de síntomas.
la rodilla y cadera del miembro inferior afecta- Si hay compromiso radicular el paciente ex-
do y el tronco tiende a fijarse hacia delante. perimenta dolor en le lado contralalteral.
Esta posición es mantenida por la contracción
de los músculos paravertebrales y se deno- OTROS SIGNOS
mina escoliosis ciática.
Signo de Neri: Estando el paciente en posi-
Las maniobras diagnósticas de compresión ción de pie, se le pide doblar el tronco hacia
radicular son todas de estiramiento y se funda- delante. La maniobra es positiva cuando se
mentan en el principio fisiopatológico de que, produce flexion involuntaria de la rodilla del
tras el estiramiento de la raíz, la compresión lado afectado. La maniobra de Neri también
de la misma genera dolor irradiado por todo se puede hacer con el paciente sedente y pi-
el trayecto del nervio. Estas maniobras son: diéndole que eleve las dos piernas al tiempo.
La pierna afectada no se elevará tanto como
Maniobra de Laségue: la técnica implica que la sana. El signo de Neri reforzado se hace
el paciente debe estar acostado, en decúbito pidiendo al paciente que eleve las piernas y
supino, con las extremidades extendidas y re- posteriormente se fleja el cuello. El paciente
lajadas. A continuación el examinador, fleja la referirá dolor y descenderá el miembro infe-
cadera a 90° y eleva suave y lentamente la rior comrometido.
pierna del paciente, quien debe informar en
que momento aparece el dolor y en donde se Signo de Nafziger: Mediante flexión forzada
localiza. La prueba será positiva si el dolor se de la cabeza, oprimiendo las yugulares tosien-
experimenta en la cara posterolateral del mus- do, se produce un dolor tipo ciático.

942
CAPÍTULO III: RADICULOPATÍA LUMBAR

Tras la evaluación de los signos de estiramien- cuidado en la correlación de las lumbalgias


to radicular es fundamental realizar un examen inespecíficas con los resultados de imágenes
de la sensibilidad superficial (tacto, tempera- diagnosticas. Una historia clínica detallada,
tura y dolor) siguiendo el esquema de los complementada con un examen físico adecua-
dermatomas. do es la mejor guía para la decisión médica.

Igualmente se debe analizar la fuerza por mio- Radiografía simple: es el primer paso en el
tomas y graduarla de acuerdo con la escala proceso diagnóstico imagenológico del dolor
clásica de 1 a 5 así: lumbar. Sin embargo arroja hallazgos poco
conclusivos. Se obtiene información sobre
5/5: Vence Gravedad y resistencia. alineamiento de la columna, esclerosis y
4/5: Vence Gravedad y resistencia pero con trofismo del hueso, neoformación ósea con
fuerza disminuida. formación de osteofitos (signos indirectos de
3/5: Vence gravedad pero no resistencia, el inestabilidad segmentaria), estenosis de los
paciente es capaz de elevar la pierna agujeros de conjugación (que solo se apre-
pero no puede hacerlo si el examinador cian en las placas oblicuas) inestabilidad
aplica una fuerza sobre el muslo. segmentaria con listesis (especialmente en el
2/5: El paciente no es capaz de vencer la segmento L5-S1), presencia de metástasis y
gravedad. Solo ejecuta movimientos en fracturas patológicas.
un solo plano.
1/5: Solo hay contracción muscular que no Aunque es innecesaria en pacientes con do-
conlleva a movimiento. lor lumbar de menos de siete semanas de du-
0/5: No hay siquiera contracción muscular. ración o que se encuentra en mejoría, se acep-
ta su uso cuando se presenta los siguientes
Los reflejos también deben ser evaluados es- casos:
pecialmente el patelar y el aquiliano y graduar-
lo de + a ++++ según la siguiente escala: 1. Edad superior a 65 años.
2. Historia clínica que sugiera alto riesgo de
+ Reflejo hipoactivo osteoporosis, relacionado con trauma que
++ Reflejo Normal pudiera ocasionar fractura.
+++ Reflejo hiperactivo 3. Déficit sensitivo persistente o déficit motor
++++ Clonus importante.
4. Dolor progresivo pese al tratamiento médi-
co adecuado.
EXÁMENES DE LABORATORIO 5. Dolor en reposo o que empeora durante la
noche.
Son de poca utilidad diagnóstica y solo se soli- 6. Fiebre, escalofrío, perdida inexplicable de
citan laboratorios prequirúrgicos en los pacien- peso.
tes que serán llevados a salas de cirugía. 7. Cirugía lumbar o fractura previa.
8. Dolor lumbar recurrente sin estudio radio-
lógico en los últimos dos años.
IMAGENOLOGÍA 9. Incapacidad de obtener historia clínica ade-
cuada.
Debido a la alta prevalencia de patología ver- 10.Circunstancias sociales / psicológicas gra-
tebral asintomática, se debe tener especial ves.

943
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Si se decide realizar estudio radiológico, este La TAC no es un examen de urgencia salvo


debe ser lo mas completo posible. Para ello en casos de trauma concomitante o déficit mo-
no basta con realizar radiografías antero-pos- tor de corta evolución que sugiera compresión
teriores y laterales sino que además hay que aguda que requiera cirugía urgente. El ejem-
solicitar placas oblicuas que permitan la eva- plo clásico es el de radiculopatía con pie caí-
luación de los agujeros de conjugación. Solo do. El mielo-TAC solo es urgente en pacien-
en los casos en que se sospeche espondilo- tes a quienes no se les puede hacer resonan-
listesis deben solicitarse estudios dinámicos. cia y tengan sospecha de masa intraraquídea
Estos rara vez son necesarios en la evalua- (Hematoma o absceso)
ción de urgencias.
Resonancia Magnética: en la actualidad es
Gamagrafía ósea: al evaluar el metabolismo el examen de elección. Sin embargo, rara vez
óseo, descarta osteomielitis, artritis degenera- es necesaria como examen de urgencia y solo
tiva y estados post-fracturas. Es muy importan- se realiza cuando hay déficit neurológico de
te en hombres mayores con antecedentes de evolución rápida. Su uso ha reemplazado am-
enfermedad prostática pues es útil para diag- pliamente a la TAC y no se justifica hacer am-
nosticar metástasis óseas. Rara vez se utiliza bos exámenes, salvo que se busque patología
en urgencias. Esta está indicada como exa- predominantemente ósea, en cuyo caso la
men de urgencias en pacientes en postopera- TAC puede complementar los hallazgos de la
torio de cirugía de columna o quienes además resonancia. Tiene buena sensibilidad para de-
de dolor radicular intenso, tienen marcada limi- terminar hernia lumbar debido a que permite
tación funcional, asociado con fiebre que pue- visualizar los tejidos blandos.
da sugerir espondilodiscitis piógena u osteo-
mielitis. Por lo demás es un examen ambula- Electromiografía y velocidades de conduc-
torio. ción: las velocidades de conducción y eléctri-
cas pueden utilizarse para confirmar el diag-
Tomografía axial computarizada: la TAC nostico clínico de radiculopatía y hacer diag-
suministra invaluable información en la pato- nostico diferencial con plexopatía o lesión del
logía relacionada con estenosis del canal, in- nervio periférico. No es un examen de
fecciones, artritis de las facetas y de la articu- urgencia.
lación sacroilíaca, en fracturas y tumores; sin
embargo, la TAC sin medio de contraste no
visualiza el espacio subaracnoideo y por tan- TRATAMIENTO
to no puede diagnosticar tumores de la cauda
equina y otras lesiones que semejan un disco El tratamiento puede ser médico o quirúrgico.
herniado. La mayoría de los pacientes con hernia discal,
se someten a tratamiento medico y respon-
La sensibilidad de la TAC aumenta cuando se den favorablemente, sólo 5-10% de los casos
usa en conjunto con una melografía, en este requieren cirugía. Son la excepción aquellos
sentido la Mielo-TAC se recomienda en pa- que presentan síndrome de cola equina o dé-
cientes con intervenciones lumbares previas ficit motor profundo.
o signos radiológicos de canal lumbar estre-
cho. La utilidad del Mielo-TAC es cuestiona- Si se recuerda, la unidad vertebral funcional,
da hoy en día por la utilidad de la resonancia resulta claro que las lesiones lumbares en al-
magnética con efecto mielográfico. guna forma deben estar relacionadas con

944
CAPÍTULO III: RADICULOPATÍA LUMBAR

anormalidades de tejidos blandos. Cuando un La terapia física, posterior al ataque agudo,


tejido se lesiona, se presenta ruptura de la libera endorfinas y promueve el fortalecimiento
membrana celular y formación de ácido ara- muscular y mineralización ósea, lo que mejo-
quidónico, a partir del cual se biosintetizan ra el metabolismo del disco y cartílago.
prostaglandinas y otros productos químicos,
lo que produce hiperalgesia que genera una Otras terapias alternativas como el tratamiento
señal dolorosa. Estas reacciones químicas quiropráctico, la electroestimulación transcutá-
son inhibidas por agentes antiinflamatorios nea y la infiltración de corticoesteroides en las
(esteroideos o no esteroideos). Igualmente, la facetas articulares, son utilizados en etapas agu-
terapia física local, limitan la reacción tisular das, pero su eficacia es controvertida y no hay
al trauma y alivian el dolor. en el momento evidencia clara de su utilidad.

Generalmente una o dos semanas de trata- Esteroides epidurales pueden ser usados para
miento conservador son suficientes para ali- aliviar el dolor agudo pero su aplicación no es
viar el cuadro en forma significativa o completa conveniente en pacientes que puedan tener
entre 80-90% de las crisis agudas de radicu- indicación quirúrgica pues la fibrosis que pro-
lopatía lumbar. ducen en el espacio peridural dificultan mu-
cho la técnica quirúrgica y pueden predispo-
El reposo en cama, ha sido el tratamiento con- ner a lesiones neurales graves. Los esteroides
vencional, probablemente partiendo de la hi- están indicados en pacientes con radiculopatía
pótesis de que la carga ejercida sobre el disco secundaria a fibrosis perirradicular post-opera-
lumbar tiene relación directa con el peso cor- toria donde no hay ninguna otra opción tera-
poral y con la posición del cuerpo. Cuando una péutica.
persona está acostada la carga sobre el disco
es mínima, pero si está sentada hacia delante El tratamiento del dolor lumbar crónico, debe
puede llegar a ser diez veces mayor. En reali- basarse en un programa de terapia física, que
dad hay poca evidencia científica que apoye el busque el realineamiento de la columna y ex-
valor terapéutico del reposo, por el contrario, tremidades para eliminar posiciones anóma-
se conoce el efecto nocivo del reposo en cama las o posiciones antálgicas, que perpetúan el
dado por el aumento del catabolismo muscu- dolor. De igual manera se utilizan antiiflamato-
lar y la desmineralización ósea. Hoy en día no rios no esteroideos para inhibir el dolor. No se
se recomiendan reposos mayores a 24 horas. recomienda el uso de esteroides. Métodos
locales como colocación de hielo, también son
Se acepta el uso de antiinflamatorios no este- utilizados.
roideos como diclofenaco en dosis de inicia-
ción de 25-50mg tres veces al día, para luego
continuar con 100mg diarios en cápsulas con CIRUGÍA
microgránulos de liberación prolongada. Rela-
jantes musculares se prescriben para mejorar Las indicaciones quirúrgicas no están bien
el espasmo asociado con esta patología como delineadas, pero se proponen cuando existe:
metocarbamol o la tizanidina. En episodios 1. Síndrome de cola equina.
agudos que requieran de hospitalización (lo 2. Déficit neurológico progresivo
cual es el menor porcentaje de pacientes) las 3. Presencia de ciática persistente a pesar del
benzodiacepinas son un excelente relajante manejo conservador por un periodo de 6-
muscular. 12 semanas.

945
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La cirugía consiste básicamente en la descom- Las complicaciones postoperatorias son de 2-


presión o liberación de la raíz correspondien- 4%.
te. La microdisectomia lumbar tiene numero-
sas variaciones, como la disectomia percutá-
nea, o la técnica endoscópica que ha adquiri- LECTURAS RECOMENDADAS
do popularidad. Alternativas como la quemo-
nucleolisis o la ablación térmica son poco 1. J Marx, R Hockberg, R Walls, et al. Rosen´s.
usadas. Emergency Medicine. Concepts and Clinical
Practice. Fifth Edition. CV Mosby, St. Louis, 2002.
2. Toro J, Yepez M, Palacios E. Neurología. Tercera
En el postoperatorio, el paciente es tratado
Edición. McGraw-Hill. Bogotá, 2001.
con antinflamatorios comunes. La movilización 3. Sahrakan K, Melicharek M. Lumbar Disc Disease.
del paciente se inicia a las 4-6 horas y la sali- www.Emedicine.com (actualizado 06 Septiembre
da del hospital dentro de las primeras 24 ho- 2002).
ras con prescripción de analgésicos.

946
CAPÍTULO IV: RADICULOPATÍA CERVICAL

CAPÍTULO IV

Radiculopatía cervical

Germán Peña Quiñones, MD


Sección de Neurocirugía,
Fundación Santa Fe de Bogotá.
Profesor Titular de Neurocirugía, Universidad El Bosque
Miembro de Número Academia Nacional de Medicina de Colombia

EPIDEMIOLOGÍA

L a prevalencia de la radiculopatía cervical


es de 3,3 casos por 1.000 personas, con
una incidencia anual de 2,1 casos por 1.000
componente simpático y luego cada raíz se
divide en una rama posterior que va hacia la
línea media y una anterior que forma parte de
individuos; ocurre más frecuentemente en la los plexos. Las cuatro primeras raíces forman
cuarta y quinta décadas de la vida. el plexo cervical y las divisiones de C5, 6,7 y
8 forman el plexo braquial con la primera raíz
En el estudio epidemiológico de la población dorsal y un ramo de C4. Además, las cinco
de Rochester, Minnesota, realizado entre 1976 primeras raíces cervicales dan ramas que for-
y 1990, se encontró antecedente de trauma man el nervio frénico.
en 14,8% de los casos; 21,9% era causada
por discos y 68,4% por cambios espondilíticos. Las lesiones, en orden de frecuencia, son: com-
La raíz más frecuentemente afectada fue C7. presiones mecánicas por discos intervertebra-
les y crecimientos óseos o tumores (neurofibro-
mas, meningiomas, leucemias, infomas), trau-
FISIOPATOLOGÍA ma, infecciones por herpes zoster y lesiones
inflamatorias. Las cuatro primeras raíces cer-
Es la lesión de una raíz nerviosa en la región vicales generalmente no presentan compresio-
cervical. Hay 8 raíces cervicales; la primera nes, aunque la segunda raíz cervical puede ser
que emerge del canal espinal entre el occipital comprimida por espondilitis; las raíces más co-
y C1, es motora con mínima cantidad de fibras múnmente afectadas por discos y crecimien-
sensitivas; las demás, C2-8, salen por el fora- tos óseos son las cuatro últimas, siendo la sép-
men situado entre las vértebras superior e in- tima las más frecuentemente involucrada.
ferior, la segunda entre C1 y C2 y la octava
entre C7 y T1, y tienen un componente motor Cuando una raíz es comprimida se produce
y otro sensitivo. Antes de salir dan un ramo dolor radicular, y posteriormente, si la com-
recurrente meníngeo que inerva la dura y los presión persiste, sobrevienen signos y sínto-
ligamentos. A la salida del foramen reciben un mas de alteración de la función.

947
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CUADRO CLÍNICO Alteración de sensibilidad:


• C5: hombro.
El primer síntoma de compresión de una raíz • C6: dedos 1 ó 1 y 2.
es dolor. En el caso de la segunda raíz se pue- • C7: dedos 1,2 y 3 ó 2 y 3.
de producir cefalea occipital; en las compre- • C8: dedos 4 y 5.
siones de las otras raíces cervicales se produ-
ce inicialmente dolor cervical, ocasionado por En el examen neurológico, además de los sig-
la compresión del ramo recurrente y posterior- nos enumerados según la raíz afectada, se
mente dolor interescapular por alteración de encuentra dolor y espasmo muscular en el
la rama posterior. Más tarde se hace evidente cuello con limitación de los movimientos; el
lo que se ha llamado dolor radicular, que se dolor es reproducido con la flexión del cuello
extiende en el miembro superior según la dis- hacia el lado de la compresión y al presionar
tribución de la respectiva raíz; así, la C5 resul- la cabeza en sentido axial (maniobra de
ta en dolor del hombro y de la parte superior Adson).
de brazo, la C6 en dolor sobre el bíceps y parte
lateral de antebrazo, la C7 en dolor sobre el
tríceps y la región mediana del antebrazo y la AYUDAS DIAGNÓSTICAS
C8 sobre la parte mediana del antebrazo.
Radiografías de columna cervical: deben
Ocasionalmente el dolor puede irradiarse has- ser el primer examen en la evaluación del pa-
ta los dedos. El dolor aumenta con los esfuer- ciente. Ayudan a descartar metástasis, espo-
zos por incremento de la presión intraespinal lones óseos, alteraciones congénitas y canal
y también con los movimientos del cuello; se estrecho.
asocia con espasmo muscular en la nuca y
puede aumentar de noche por el alargamiento Radiografías dinámicas: se utilizan cuando
de la columna en la posición de decúbito; pos- se descubre espondilolistesis o si se sospe-
teriormente aparece déficit motor, sensiti- cha inestabilidad espinal.
vo y de reflejos.
Tomografía axial computadorizada (TAC):
Déficit motor: debilidad y más tarde atrofia y demuestra muy bien las alteraciones óseas,
fasciculaciones distribuidas principalmente así: pero no muy claramente las alteraciones del
• C5: deltoides, supraespinoso e infraespi- disco o de los elementos neurales. Su utiliza-
noso. ción se debe restringir a casos especiales,
• C6: bíceps, braquirradial y extensores de cuando sea necesario demostrar alteraciones
muñeca. óseas.
• C7: tríceps, extensores de muñeca, flexo-
res y extensores de los dedos. MieloTAC (mielografía con TAC): la combi-
• C8: interóseos y músculos intrínsecos de nación de la mielografía (examen en el cual
mano. se inyecta un medio yodado, radio opaco en
el espacio subaracnoideo del canal raquídeo
Disminución de reflejos miotáticos: y luego se toma una TAC) permite demostrar
• C5: deltoides. alteraciones del canal y de su contenido. Está
• C6: bíceps. indicado sólo en casos seleccionados y cuan-
• C7: tríceps. do los otros métodos de diagnóstico han fra-
• C8: tríceps. casado.

948
CAPÍTULO IV: RADICULOPATÍA CERVICAL

Resonancia magnética (RM) de columna TRATAMIENTO INICIAL


cervical: la RM es el estudio que mejor de-
muestra las alteraciones de la columna cervi- Una vez hecho el diagnóstico de compresión
cal y de su contenido; es el examen de prefe- por disco o por espondilitis, se procede a prac-
rencia para la demostrar las causas de las ticar el tratamiento médico con analgésicos,
radiculopatías. Permite el diagnóstico de los drogas antiinflamatorias y fisioterapia que in-
tumores que pueden afectar las raíces y des- cluya tracción, medios físicos y masaje. Este
carta otras alteraciones dentro del canal tratamiento se debe seguir por una a dos
espinal. semanas.

Electromiograma y velocidades de conduc- Si hay mejoría y desaparición de los síntomas


ción: el electromiograma demuestra la raíz se recomienda continuar el fortalecimiento
afectada y es muy útil para aclarar cuál es la muscular para prevenir recaídas. Si durante
raíz más lesionada en el caso de lesión de el tratamiento médico hay empeoramiento o
varias raíces. Las velocidades de conducción se presenta déficit neurológico se debe pro-
y la mielografía son necesarias para diferen- ceder con el tratamiento quirúrgico.
ciar la radiculopatía por compresión de afec-
ciones inflamatorias de la raíz o de los ner-
vios que pueden simular una radiculopatía. TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
Potenciales motores evocados: es un exa- Está orientado a retirar el elemento que está
men que puede ayudar a demostrar la raíz comprimiendo la raíz, bien sea el disco, espo-
afectada y es útil en casos dudosos. lón óseo o cambios espondilóticos. Se han
descrito varias técnicas, tanto por abordaje an-
Bloqueos neurales: se han utilizado tanto terior como posterior, para la descompresión
como parte del tratamiento para controlar el de la raíz y para retirar el disco o la causa de
dolor, como método para comprobar que evi- la compresión.
dentemente el cuadro doloroso es causado
por la lesión demostrada en imágenes. Tam- La cirugía por vía posterior se ha utilizado des-
bién se han empleado como factor para pre- de 1944, practicando laminectomía y más tar-
decir, si mejora el dolor, un buen resultado de hemilaminectomía parcial. En los últimos
quirúrgico. años se vienen utilizando técnicas microquirúr-
gicas mínimamente invasoras (laminoforami-
nectomía microquirúrgica posterior) y última-
ATENCIÓN PREHOSPITALARIA mente por medio de endoscopio. La vía poste-
rior es aconsejada para el manejo de hernias
La atención del paciente con radiculopatía laterales o de la estenosis del foramen por es-
cervical se debe hacer en forma ambulatoria pondilosis. También desde 1955 se han utiliza-
hasta tener el diagnóstico y efectuar el trata- do diferentes técnicas para el abordaje por vía
miento inicial. En caso de fracaso del trata- anterior (Smith y Robinson y Cloward), luego
miento inicial y cuando se haya decidido tra- utilizando el microscopio, seguidas o no de
tamiento quirúrgico, se procede con la hospi- fusión ósea por medio de injerto óseo. Son
talización del paciente. muy buenos los resultados, con mejoría rápi-
da del paciente, tanto con el abordaje ante-
rior como con el posterior.

949
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CRITERIOS DE REFERENCIA after cervical epidural steroid injection. Spine


1990; 18:730-736.
Una vez establecido el diagnóstico y si no hay 7. Grote W, Kalff R, Roosen K. Surgical treatment of
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mejoría con el tratamiento médico, el pacien-
Neurochir 1991; 52:101-108.
te debe ser referido a un centro donde se 8. Hadley M, Sonntag V. Cervical disc herniations.
cuente con RM y con especialistas capacita- The anterior approach to syntomatic interspace
dos para el tratamiento de estas lesiones. Igual pathology. Neurosurg Clin N Am 1993; 4:45-52.
conducta se debe tener si el paciente presen- 9. Hunt W, Miller C. Management of cervical radi-
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10. Jho HD. Decompression via microsurgical anterior
foraminotomy for cervical spondylotic myelopathy.
Technical note. J Neurosurg 1997; 86:297-302.
PRONÓSTICO 11. Jho H. Microsurgical anterior cervical foramino-
tomy for radiculopathy: a new approach to cervi-
Se trata de una lesión de buen pronóstico, con cal disc herniation. J Neurosurg 1996; 84:155-160.
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Bogotá. Editado por G Peña, T Perilla, A Pedrosa.
LECTURAS RECOMENDADAS Memorias del XVII Congreso Colombiano de
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13. Johnson J, Filler A, McBride D, et al. Anterior cer-
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results of a new technique in 100 cases. J Neuros
14. Kunogi J, Hasue M. Diagnosis and treatment of
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2. Barlett R, Hill C, Devlin R, et al. Two dimensional
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Clin N Am 1993; 4:61-74. 16. Neuhold A, Stikal M, Platzer C et al: Combined
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5. Fager C. Identification and management of radicu- Neuroradiology 1991; 33:422-426.
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950
CAPÍTULO V: ENFERMEDADES DEL TEJIDO CONECTIVO

CAPÍTULO V

Enfermedades del tejido conectivo

Patricia Julieta Vélez Sánchez, MD


Sección de Reumatología
Clínica San Pedro Claver
Bogotá

M últiples manifestaciones de las enferme-


dades de tejido conectivo obligan a con-
sultar a los servicios de urgencias. En el 20%
autoanticuerpos contra diferentes antígenos
celulares. Afecta principalmente a mujeres en
edad reproductiva. Aunque su etiología es
de los casos es la primera manifestación de desconocida, múltiples factores han sido im-
una enfermedad no diagnosticada, lo que di- plicados y muchos de sus mecanismos inmu-
ficulta su manejo rápido y agresivo. nes han sido estudiados.

Aproximadamente 10-25% de los pacientes


con enfermedades reumáticas visitan los ser- FISIOPATOLOGÍA
vicios de urgencias. De éstos, una tercera
parte requiere manejo en la unidad de cuida- Un estímulo antigénico, desencadena la pro-
do intensivo (UCI). ducción de anticuerpos en un huésped sus-
ceptible. La interacción antígeno-anticuerpo
Las principales razones que llevan a estos (Ag-Ac) resulta en la formación de complejos
pacientes a consultar son: macromoleculares solubles, que pueden indu-
cir una respuesta inflamatoria aguda o crónica
• Exacerbación de alguna manifestación de de acuerdo a su tamaño, concentración, solu-
enfermedad reumatológica pre-existente. bilidad, capacidad de activar complemento y
• Desarrollo de una nueva manifestación de tropismo por el tejido. Se depositan generan-
la misma. do un gran número de mediadores de inflama-
• Infección como resultado de la inmunosu- ción: interleucinas, radicales de oxígeno, pros-
presión. taglandinas y leucotrienos que desencadenan
• Efectos adversos de los medicamentos uti- el daño tisular.
lizados en el tratamiento.
• Enfermedades agudas serias, no muy re-
lacionadas con la enfermedad de base. MANIFESTACIONES CLÍNICAS
El LES es una enfermedad que afecta a las
1. LUPUS ERITEMATOSO SISTÉMICO mujeres en proporción significativamente ma-
yor que a los hombres. No hay datos exactos
El lupus eritematoso diseminado o sistémico sobre la prevalencia en nuestra población. La
(LES) es el prototipo de enfermedad autoin- edad de presentación está entre los 16-55
mune, caracterizado por la producción de años, pero puede afectar también a niños y

951
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ancianos. La raza negra y el nivel socioeconó- alteración, por mínima que parezca, que indi-
mico bajo han sido indicadores de mal pronós- que cualquier grado de compromiso renal.
tico.
La nefritis clínica, definida como proteinuria
Los síntomas constitucionales, la fatiga y los persistente se presenta en 50% de los pacien-
síntomas músculo-esqueléticos se presentan tes. La creatinina sérica es pobre indicador
en casi todos los casos. El compromiso cutá- de enfermedad renal temprana. Los pacientes
neo es amplio: la fotosensibilidad, el rash ma- con enfermedad renal activa generalmente
lar, el rash discoide, las úlceras orales, la alo- exhiben un uroanálisis con hematuria, protei-
pecia, el livedo reticularis, el eritema periun- nuria, leucocituria y cilindros celulares. Estos
gueal, el fenómeno de Raynaud, las telangiec- pacientes pueden beneficiarse de terapia
tasias y la urticaria son algunos de los signos agresiva con inmunosupresores y corticoides
que se pueden presentar en pacientes con a altas dosis. La tasa de mortalidad para esta
LES. población es de 15% a 5 años y de 35% a 10
años.
A continuación se exponen brevemente las
principales manifestaciones, por sistemas, de
una constelación de signos y síntomas que MANIFESTACIONES PULMONARES
se pueden presentar en el curso de la enfer-
medad. El compromiso más frecuente es la serositis,
que se presenta hasta en 50% de los pacien-
tes. La neumonitis es de gran importancia
COMPROMISO RENAL porque el diagnóstico diferencial con los pro-
cesos infecciosos es fundamental para el éxi-
El compromiso renal en LES es de gran im- to del manejo. Las infecciones oportunistas,
portancia, no sólo por su alta frecuencia sino bacterianas y por hongos deben tenerse en
por que puede ser marcador pronóstico de la cuenta principalmente en pacientes que reci-
enfermedad; para su estudio y manejo se uti- ben inmunosupresores. La fibrosis pulmonar
liza la clasificación de la Organización Mun- no es tan frecuente, pero puede predominar
dial de la Salud (OMS) según los resultados como manifestación en un subgrupo de pa-
de la biopsia renal: cientes. La hemorragia pulmonar es una real
emergencia aunque afortunadamente es una
I. Normal. rara manifestación, pero con una alta mortali-
II. Nefritis mesangial. dad. La hipertensión pulmonar y el tromboem-
III. Nefritis proliferativa focal. bolismo pulmonar pueden estar asociados con
IV. Glomerulonefritis proliferativa difusa. el síndrome antifosfolípido.
V. Glomerulonefritis membranosa esclero-
sante. La falla respiratoria es el diagnóstico más co-
mún en series de pacientes con LES en las
Existe aún mucha controversia sobre cuándo unidades de cuidado intensivo. Puede estar
realizar la biopsia. Algunos la practican en to- relacionado con la actividad de la enferme-
dos los pacientes con diagnóstico de LES. No- dad o con infecciones oportunistas en el pa-
sotros, con la colaboración del Grupo de Ne- ciente inmunocomprometido. Los síntomas
frología de nuestro Hospital, la practicamos incluyen disnea, tos, dolor torácico o hemop-
en el momento en que presenten cualquier tisis.

952
CAPÍTULO V: ENFERMEDADES DEL TEJIDO CONECTIVO

INFILTRADOS PULMONARES MANIFESTACIONES


CARDIOVASCULARES
Los infiltrados pulmonares en pacientes inmu-
nocomprometidos con LES pueden ser debi- 30% a 50% de los pacientes pueden tener al-
dos a actividad de la enfermedad, a neumonitis guna manifestación cardiovascular, siendo la
lúpica o a un proceso infeccioso. La presencia más frecuente la pericarditis, que ocurre en
de algunas manifestaciones extrapulmonares 30% de los casos; el taponamiento cardíaco
de actividad de la enfermedad como lesiones es raro, la miocarditis es menos frecuente y,
en piel, vasculitis o compromiso renal sugiere si existe un soplo cardiaco, puede estar rela-
que el proceso es secundario a dicha activi- cionado con fiebre, anemia, hipoxia o por la
dad. Los pacientes con enfermedad activa tie- llamada endocarditis de Liebman-Sachs; esta
nen mayor riesgo de infección. última más frecuentemente asociada con Acs
antifosfolipidos, siendo las válvulas más com-
Síntomas rápidamente progresivos que se de- prometidas la mitral y la aórtica. Las mujeres
sarrollan en varias horas o un día sugieren un con LES tienen 50 veces mayor probabilidad
proceso bacteriano agudo. de desarrollar infarto agudo del miocardio
(IAM), presumiblemente por vasculitis o por
Un curso subagudo, de varios días o semanas, otros factores de riesgo que acompañan a
es más sugestivo de una infección oportunis- esos pacientes como ateroesclerosis, uso de
ta, tal como Pneumocystis carini, o la exacer- corticoides, hipertensión arterial y otros. El
bación de una enfermedad reumática. fenómeno de Raynaud puede acompañar has-
ta 20% de los pacientes y estar asociado con
hipertensión pulmonar.
MANIFESTACIONES HEMATOLÓGICAS
La falla ventricular aguda causada por miocar-
Ochenta por ciento de los pacientes con LES ditis no es rara en pacientes con LES, lo
pueden tener anemia crónica y con menor fre- mismo que las arritmias secundarias a la mio-
cuencia presentar anemia hemolitica; sesen- carditis.
ta por ciento presentan leucopenia con pre-
sencia de linfopenia, que puede estar asocia-
da a anticuerpos (Acs) anti-linfocitarios. La MANIFESTACIONES
trombocitopenia se encuentra hasta en 50% NEUROPSQUIÁTRICAS
de los casos.
Son múltiples las manifestaciones neurológi-
Se debe recordar que estos pacientes pueden cas en el LES, desde anormalidades funciona-
presentarse con fiebre, linfadenopatías y es- les, que pueden ser tan sutiles que solamen-
plenomegalia, lo que obliga siempre a descar- te las personas más allegadas a los pacien-
tar enfermedades linfoproliferativas o tes las pueden detectar, hasta alteraciones
infecciosas. orgánicas severas que pueden dejar graves
secuelas. El compromiso puede ser a nivel del
Los eventos trombóticos, pueden estar rela- SNC o del sistema nervioso periférico y puede
cionados con la presencia de anticoagulante estar asociado con actividad de la enferme-
lúpico, Acs antifosfolipidos, Acs contra facto- dad, procesos infecciosos agregados, altera-
res de coagulación o deficiencias hereditarias ciones hidroelectrolíticas, efectos secundarios
de factor C, S o antitrombina III. de algunos medicamentos (por ejemplo la

953
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

psicosis por corticoides) o asociación con Acs CRITERIOS DIAGNÓSTICOS DE


antifosfolipidos. No hay que olvidar que la LUPUS ERITEMATOSO SISTÉMICO
cefalea es un síntoma muy frecuente de acti-
vidad lúpica. La migraña y los accidentes ce- 1. Rash malar.
rebro-vasculares pueden estar asociados con 2. Rash discoide.
Acs antifosfolípidos. La meningitis aséptica 3. Fotosensibilidad.
puede estar asociada con la administración 4. Ulceras orales.
de algunos antiinflamatorios no esteroideos 5. Artritis no erosiva.
(AINES). También la psicosis, las convulsio- 6. Serositis.
nes, los movimientos anormales, la mielitis 7. Enfermedad renal Proteinuria > de 0,5 gr
transversa y las neuropatías periféricas son día Cilindros celulares.
otras manifestaciones del sistema nervioso 8. Compromiso neurológico (Convulsiones,
que pueden presentarse. psicosis).
9. Compromiso hematológico.
• Anemia hemolítica.
MANIFESTACIONES • Leucopenia <4.000.
GASTROINTESTINALES • Linfopenia <1.500.
• Trombocitopenia <100.000.
En la mayoría de los casos el compromiso 10.Desorden inmunológico
gastrointestinal es debido al uso de medica- • Células LE positivas.
mentos como AINES y corticoides, entre otros. • Anti DNA nativo (+).
El dolor abdominal agudo en un paciente con • Anti Sm (+).
LES es un verdadero reto, porque pueden ser • VDRL Falso (+).
múltiples sus causas. Se describe en la litera- 11.Anticuerpos antinucleares positivos
tura que, aun en manos experimentadas, has-
ta 50% de los pacientes pueden ir a laparo-
tomías en blanco. TRATAMIENTO DEL LES
Como para muchas enfermedades, es difícil
DIAGNÓSTICO establecer protocolos de manejo, más aún en
ésta entidad, en la que existe un amplio es-
El diagnóstico de LES debe hacerse teniendo pectro de presentaciones, con características
en cuenta las manifestaciones clínicas y la y grados de severidad diferentes.
ayuda del laboratorio. Los criterios del Cole-
gio Americano de Reumatología, revisados en
1982, tienen una sensibilidad y especificidad SÍNTOMAS CONSTITUCIONALES:
de 96%. Si se encuentran cuatro de los 11 FIEBRE, FATIGA, ASTENIA
criterios enumerados a continuación se pue-
de hacer el diagnóstico de LES. 1. Descartar proceso infeccioso.
2. AINES + antimaláricos.
3. Si no hay respuesta, dosis bajas de
corticoides.
4. Si no hay respuesta, dosis altas de
corticoides.
5. Si hay respuesta, disminuir corticoides.

954
CAPÍTULO V: ENFERMEDADES DEL TEJIDO CONECTIVO

ARTRITIS Y ARTRALGIAS COMPROMISO RENAL


1. AINES y antimaláricos o metotrexate. Según biopsia renal:
2. Si no responde, adicionar dosis bajas de 1. Mesangial: sin terapia especifica.
corticoides. 2. Proliferativa focal: sin terapia especifica.
3. Raros casos requieren dosis altas de corti- 3. Proliferativa difusa: ciclofosfamida, azatio-
coides o citostáticos. prina o mofetil micofenolato. Dosis altas de
4. Si persisten síntomas, descartar necrosis corticoides o bolos de metilprednisolona.
aséptica o artritis séptica. 4. Membranosa: dosis altas de corticoides.
5. Esclerosante: sin terapia especifica.
COMPROMISO CUTÁNEO
1. Antimaláricos o metotrexate. En todos los casos iniciar manejo especifico
2. Protectores solares. de insuficiencia renal aguda o crónica y mane-
3. Dapsona (casos especiales). jo del LES según manifestaciones clínicas. El
4. Etretinato (casos especiales). tiempo de duración de los bolos de ciclofosfa-
mida y la frecuencia de su administración es
SEROSITIS controvertido. Nosotros utilizamos un bolo
1. AINES más antimaláricos o metotrexate. mensual por 6 meses o hasta que se controle
2. Si no hay respuesta, dosis bajas de corti- la actividad; posteriormente cada 3 meses por
coides. un año, continuando cada 6 meses por un año
3. Si no hay respuesta o hay compromiso he- y luego uno anual.
modinamico, dosis altas de corticoides o
bolos de metilpredinisolona. COMPROMISO HEMATOLÓGICO
1. Dosis altas de corticoides.
MIOSITIS 2. Gamaglobulina IV ( trombocitopenia).
1. Descartar miopatía por esteroides o por 3. Danazol.
antimaláricos. 4. Ciclofosfamida o azatioprina.
2. Dosis altas de corticoides. 5. Esplenectomía en casos severos en que
no haya respuesta.
SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
1. Descartar: infección, alteración hidroelec- DOSIS DE MEDICAMENTOS
trolítica, psicosis por corticoides. • Antinflamatorios no esteroideos (AINES):
2. En evento agudo: bolos de metilpredni- dosis convencionales. Precaución con ibu-
solona o dosis altas de corticoides. profeno, sulindac y tolmetin, entre otros,
3. Adicionar bolos de ciclofosfamida. que han causado meningitis aséptica en
4. Iniciar manejo específico para psicosis o pacientes con LES.
convulsiones. • Antimaláricos: hidroxicloroquina 200-400
mg día. Cloroquina 150-200 mg día.
COMPROMISO PULMONAR • Dapsona: dosis inicial 25 mg c/12 hrs. Do-
1. Descartar infección. sis de mantenimiento 25 mg día
2. Iniciar bolos de metilprednisolona. • Etretinato: dosis inicial 25 mg c/12 hrs.
3. Si no responde, bolos de ciclofosfamida. Dosis de mantenimiento 10-25 mg día.
4. Si no es posible descartar infección, iniciar • Bolos de metilprednisolona: 500-1000 mg
antibióticos de amplio espectro. día por 3-5 días.
• Bolos de ciclofosfamida : 500-1000 mg/m 2
de superficie corporal.

955
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Azatioprina: 1-3 mg/kg de peso día, dosis ini- curso fulminante. Este síndrome antifosfolipido
cial. 1-2 mg/kg/día dosis de mantenimiento. catastrófico fue definido como un proceso
• Metotrexate: 2,5-15 mg semanal. vaso-oclusivo que compromete al menos tres
• Dosis bajas de corticoides: <15 mg día de órganos, en asociación con niveles elevados
dosis equivalente de prednisona. de anticardiolipinas o anticoagulante lúpico po-
• Dosis altas de corticoides: 1-2 mg/kg de sitivo. La trombocitopenia y la anemia hemolíti-
peso al día dosis equivalente de predni- ca usualmente se encuentran presentes.
sona.
Puede encontrarse en pacientes con síndro-
Siempre usar la menor dosis requerida para me antifosfolípido primario o secundario. La
controlar la enfermedad y, en caso de usar tasa de mortalidad reportada es de más de
corticoides, disminuir las dosis hasta que las 50%.
manifestaciones clínicas lo permitan o, si es
posible, emplearlos en días alternos. MANIFESTACIONES PULMONARES
(66% de los pacientes):
Nunca olvidar: • Embolismo pulmonar con o sin infarto.
• Descartar infecciones agudas o crónicas. • Hipertensión pulmonar.
Si el paciente pertenece a una población • Hemorragia alveolar.
de riesgo, instaurar terapia profiláctica con- • Alveolitis fibrosante.
tra TBC. • La principal manifestación es un Síndrome
• Desparasitar al paciente (Incluir de Dificultad Respiratoria Aguda (SDRA).
Strongiloides).
• Profilaxis para osteoporosis si recibe MANIFESTACIONES CARDÍACAS
corticoides (calcio, etindronato). (36% de los casos)
• Conocer todos los efectos secundarios de • Vegetaciones valvulares.
los AINES, antimaláricos, corticoides y • Oclusión de arterias coronarias con IAM.
citostáticos para poder controlarlos. • Formación de trombos en las cámaras
• Educación acerca de la enfermedad y los cardiacas.
efectos secundarios de las drogas. • Insuficiencia cardiaca congestiva.
• Terapia física. • Dilatación ventricular.
• Manejo psicológico. • Pericarditis.

COMPROMISO RENAL
SÍNDROME ANTIFOSFOLÍPIDO • Presentación inicial en 14% de los pacientes.
CATASTRÓFICO • Elevación de BUN y creatinina.
• Uroanálisis con evidencia de hematuria,
El término síndrome antifosfolípido se intro- proteinuria y cilindros granulares o hialinos.
dujo para definir un grupo de pacientes con • Falla renal inicialmente no oligúrica, con
episodios de trombosis, trombocitopenia y rápida progresión a oligúrica y necesidad
pérdidas fetales recurrentes con aumento de de diálisis.
los Acs anticardiolipina (aCL) o anticoagulante • Hipertensión sistémica.
lúpico.
MANIFESTACIONES DE SNC
En 1980 se describieron casos de pacientes • Convulsiones.
con síndrome antifosfolipido que tenían un • Estupor y coma.

956
CAPÍTULO V: ENFERMEDADES DEL TEJIDO CONECTIVO

• Micro-trombos o micro-infartos en 26%. • Manipulación arterial.


• Infarto de grandes vasos en 13%. • Embarazo.
• Trombosis de la arteria central de la retina. • Asociación con malignidad.
• Mononeuritis múltiple. • Suspensión de la anticoagulación.
• Necrosis de glándula pituitaria. • Exacerbación de LES.
• Uso de medicamentos como anticoncepti-
MANIFESTACIONES ABDOMINALES vos orales, tiazidas y captopril.
• Compromiso hepático en 34%-37%.
• Compromiso esplénico en 17% – 20%.
• Compromiso pancreático en 12%. TRATAMIENTO
• Gangrena intestinal.
• Perforación esofágica con mediastinitis. 1. Soporte para falla de órganos específicos.
• Colitis isquémica. 2. Suprimir el proceso trombótico microvascular.
• Necrosis isquémica acalculosa de la vesí-
cula biliar. La combinación de anticoagulación, esteroi-
• Compromiso de la glándula suprarrenal. des, plasmaféresis o gammaglobulina IV en
una serie de 50 pacientes con síndrome anti-
MANIFESTACIONES DE PIEL fosfolipido catastrófico mostró una rata de re-
(en 50%–52% de los casos) cuperación de 70%.
• Livedo reticularis.
• Isquemia digital. El uso de terapia inmunosupresora como ciclo-
• Hemorragias en astilla. fosfamida, azatioprina, ciclosporina aún es dis-
• Úlceras. cutida; sin embargo, puede ser de utilidad en
• Gangrena superficial de miembros supe- pacientes con LES como mecanismo dispa-
riores. rador.
• Gangrena con amputación de extremida-
des (es de mal pronóstico). La anticoagulación es la primera línea de trata-
miento. Las dosis altas de esteroides son re-
HALLAZGOS DE LABORATORIO comendadas para disminuir la cantidad de
• Títulos elevados de anticardiolipina aCL citoquiinas liberadas en esta entidad.
positivo en 98% de los pacientes. El isóto-
po IgG o anticoagulante lúpico LA es posi-
tivo en 68% de los casos. LECTURAS RECOMENDADAS
• ANAS positivos, usualmente en bajos títulos.
• DNA positivos, usualmente en pacientes 1. Asherson RA, Cervera R, Piette J, et al.
con LES concomitante. Catastrophic antiphospholipid syndrome. Clinical
• Anticuerpos contra B2-GPI positivos. and laboratory features of 50 patients. Medicine
(Baltimore) 1998; 77:195-207.
• Trombocitopenia en 60%-68% de los pa-
2. Asherson RA. The catastrophic antiphospholipid
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• Anemia hemolítica en 26%-39%. 3. Duna GF, Cash JM. Treatment of refractory
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• Trauma. involmement in systemic lupus erytematosus.
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957
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

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958
CAPÍTULO VI: EPISTAXIS

CAPÍTULO VI

Epistaxis

Alvaro Gómez, MD
Sección de Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

L a epistaxis o hemorragia nasal es un sín-


drome de frecuente aparición en la pato-
logía nasal. Tanto la prevalencia como las difi-
y se divide en las tres arterias nasales y en
la nasopalatina o arteria del tabique que
se dirige hacia la pared interna de las fosas.
cultades terapéuticas son provocadas por la Enmarca la coana por debajo del cuerpo
gran riqueza de la vascularización de las fosas del esfenoides y recorre el tabique por el
nasales y por las múltiples causas locales y borde superior del vomer, para terminar en
generales que pueden provocar sangrado. la parte más anterior e inferior del tabique.
2. Arteria palatina descendente. Recorre el
conducto palatino posterior para dirigirse
VASCULARIZACIÓN hacia adelante al conducto palatino ante-
DE LAS FOSAS NASALES rior; entra a la cavidad nasal a nivel del ta-
bique anterior.
La nariz está irrigada por los dos sistemas 3. Arteria del subtabique. De la arteria facial
arteriales carotídeos, el externo y el interno. nace la arteria del subtabique, que da ra-
mas terminales a nivel del vestíbulo nasal
y de la región del tabique anterior.
SISTEMA DE LA CARÓTIDA EXTERNA

La irrigación se hace por tres ramas de la ca- SISTEMA DE LA CARÓTIDA INTERNA


rótida externa. Dos de ellas nacen de la arte-
ria maxilar interna (la esfenopalatina y la pala- La arteria oftálmica, rama de la carótida interna,
tina descendente), y una de la arteria facial da a nivel de la órbita dos ramas etmoidales:
(la del subtabique).
1. Arteria etmoidal anterior. Sin duda, es la
1. Arteria esfenopalatina. Es el verdadero hilio más importante. Pasa de la órbita a la fosa
vascular de la nariz; de ella depende la ma- nasal por el conducto etmoidal anterior, di-
yor parte de la vascularización de las fosas vidiéndose en ramas externas que irrigan
nasales. Rama terminal de la arteria maxi- la región más superior y anterior de la pa-
lar interna, toma su nombre al salir del agu- red externa, y ramas internas que descien-
jero esfenopalatino, en la parte más profun- den hacia la zona anterior e inferior del ta-
da de la pared externa de las fosas nasales, bique nasal.

959
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Arteria etmoidal posterior. A través del con- Una zona del tabique, la anteroinferior, es la
ducto etmoidal posterior irriga una peque- región terminal de cuatro de los troncos arte-
ña parte superior de las fosas nasales, riales anteriormente descritos: arteria nasopa-
prácticamente sólo la región olfativa. latina, arteria palatina descendente, arteria del
subtabique y arteria etmoidal anterior. Esta re-
gión anatómica se conoce como mancha vas-
cular o zona de Kiesselbach.

ESQUEMA DE VASCULARIZACIÓN DE LAS FOSAS NASALES

960
CAPÍTULO VI: EPISTAXIS

ETIOLOGÍA EPISTAXIS EN EL ADULTO

Ante una hemorragia nasal, se debe registrar 1. Causas generales


la edad del paciente como dato esencial para • Hipertensión: es responsable de gran
establecer el diagnóstico etiológico. número de epistaxis recidivantes. Cau-
sa cuadros graves, generalmente origi-
nados en la parte posterior de las fosas
EPISTAXIS DE LA INFANCIA nasales. Es la forma de hemorragia que
ocasiona los problemas terapéuticos
1. Inflamación mucosa: todos los procesos más importantes.
inflamatorios pueden producir hemorragia • Enfermedades endocrinas: en el emba-
nasal. La gripe, el sarampión, la escarlati- razo, generalmente durante los prime-
na y la rubeola son los más frecuentes. ros meses, es frecuente la rinitis conges-
2. Cuerpos extraños: los cuerpos extraños tiva y la epistaxis también. Las crisis son
presentes en las fosas nasales pueden frecuentes y desaparecen espontánea-
causar cuadros hemorrágicos poco abun- mente después del parto.
dantes, pero repetidos. • Causas locales:
3. Traumatismos: sobre todo maniobras de a. Úlcera trófica y perforación del septum
rascado de la zona de Kiesselbach. Son, nasal: sangra discretamente pero en for-
sin duda, la causa de epistaxis más fre- ma repetida. Las causas más frecuentes
cuente en la infancia. de esta patología son: cirugía septal, pa-
4. Epistaxis esencial: crisis frecuentes de he- rásitos (leishmaniasis), colagenosis
morragias sin causa aparente. Sangra (granulomatosis de Wegener), tóxicas
siempre la mancha vascular anterior. No (plomo, metales pesados), inhalantes
es raro que se trate de una predisposición (cocaína).
hereditaria. b. Cuerpos extraños: pueden provocar se-
creción sanguinolenta y pequeñas epis-
taxis a repetición.
EPISTAXIS DE LA PUBERTAD c. Tumores: todos los tumores malignos
del septum, nasosinusales y rinofarín-
En la pubertad aparecen cuadros hemorrá- geos pueden ser causa de epistaxis, en
gicos ligados a alteraciones endocrinas. general escasas, pero repetidas. Ante
un persistente moco hemático, debe
1. Enfermedad de Werloff: coincide siempre descartar se un proceso neoplásico
con un síndrome de metrorragias más o nasosinusal.
menos manifiesto.
2. Nasoangiofibroma: en el género masculino
cursa siempre con hemorragias repetidas, EPISTAXIS EN TODAS LAS EDADES
de ubicación posterior, que llevan a graves
anemias agudas. La asociación de sexo • Enfermedades hemorragíparas: son poco
masculino, edad adolescente, con epistaxis frecuentes, pero causan problemas serios.
y obstrucción nasal unilateral deben indu- Es necesario destacar que en estos casos
cir la sospecha de este cuadro clínico. las maniobras locales de inspección deben
ser mínimas, por el riesgo de agravar el
proceso creando nuevas zonas sangran-

961
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

tes. Pueden ser debidas a alteración de agudeza visual deben poner al médico en
cualquiera de los distintos procesos de la alerta.
hemostasia, el vascular, el plaquetario o el
propio de la coagulación:
i. Síndrome vasculopático: puede deber- EVALUACIÓN Y EXPLORACIÓN
se a malformaciones congénitas, como DE LAS EPISTAXIS
la angiomatosis familiar hereditaria de
Osler Weber Rendu o a telangiectasias Ante un cuadro de epistaxis grave por su abun-
mucocutáneas de predominio facial y dancia, es necesario el tratamiento de urgen-
que abundan a nivel de la mucosa del cia sin precisar más que el lado afectado y
tabique. orientado a lograr hemostasia rápida, para
ii. Síndrome trombocitopénico-trombocito- pasar después a un estudio más profundo. En
pático: está dominado por los cuadros general es posible plantear unos lineamientos
de púrpuras. Son las leucemias agudas, de atención básicos y obtener los datos ne-
reticulosis, aplasias medulares, la ya cesarios para establecer un diagnóstico y apli-
mencionada enfermedad de Werloff, y car tratamiento.
alteraciones medicamentosas (aspirina,
sulfamidas, anti-inflamatorios, etc).
iii. Síndrome coagulopático: déficit de coa- PRECISAR LAS CARACTERÍSTICAS
gulación de carácter hereditario, como
la hemofilia, o adquirido por avitaminosis La anamnesis debe ser detallada, evaluando an-
K, secundario a tratamientos anticoagu- tecedentes familiares, como predisposición he-
lantes o a enfermedades del hígado. morrágica, hemofilia y angiomatosis, y registran-
• Traumatismos. Las epistaxis traumáticas do antecedentes personales pertinentes a epi-
pueden ser leves, como las consecuentes sodios hemorrágicos, tanto nasales como de
a fractura nasal no complicada, o severas otros órganos, alteraciones dermatológicas
por traumatismos fronto-orbitarios donde se (petequias, hematomas y equimosis), hemorra-
puede lacerar las arterias etmoidales an- gias secundarias a actos quirúrgicos o peque-
teriores a nivel de sus orificios de entrada ños traumatismos. Se debe conocer si el pa-
en la lámina cribiforme, o por fracturas fa- ciente se encuentra en tratamiento de otra enfer-
ciales tipo Lefort III donde la arteria com- medad, y qué medicamentos está recibiendo.
prometida es la esfenopalatina por fractu-
ra de la mesoestructura facial. Un trauma- Se debe registrar la magnitud el sangrado y
tismo grave es la lesión de la carótida in- el lado afectado. Casi siempre el inicio es uni-
terna por fractura de la pared externa del lateral, pero se hace bilateral por el reflujo de
seno esfenoidal a nivel del seno caverno- sangre por las coanas, por la colocación de
so, la cual puede originar un aneurisma un taponamiento insuficiente o por la simple
post-traumático. Es más común en las frac- extensión de la cabeza hacia atrás.
turas de la base del cráneo. Después de
una epistaxis de repetición leve, en los días
posteriores al traumatismo, aparece una RECONOCER LA EPISTAXIS
hemorragia cataclísmica. En algunos ca-
sos puede retrasarse meses o aun años. Saber explorar y “ver” el punto sangrante sig-
La aparición de exoftalmia pulsátil, paráli- nifica, en la mayoría de casos, tener domina-
sis de oculomotores o disminución de la da la epistaxis.

962
CAPÍTULO VI: EPISTAXIS

La exploración debe basarse en una inspec- el área vascular de Kiesselbach, en la par-


ción instrumental con buena iluminación para te anteroinferior del tabique, en las zonas
realizar rinoscopia anterior con aspiración, superiores del tabique y de la pared exter-
procedimiento que permitirá localizar los pun- na de las fosas correspondientes a las ar-
tos sangrantes anteriores. La inspección de terias etmoidales anteriores. También se
la faringe mediante un simple bajalenguas, ubican en el suelo de la fosa a nivel de la
permite comprobar el paso de sangre hacia emergencia de la arteria del subtabique y
la faringe. de la palatina descendente.
2. Epistaxis posteriores. Tres puntos son im-
Topográficamente hay dos grandes grupos de portantes: la entrada del pedículo esfeno-
epistaxis: palatino, el inicio de las ramas turbinales
1. Epistaxis anteriores: son las más frecuen- media e inferior y la zona vecina a la cola
tes y se localizan predominantemente en del cornete inferior.

FLUJOGRAMA DE TRATAMIENTO

Epistaxis

Anterior si se identifica vaso Posterior

Cauterización Taponamiento anterior unilateral

Re sangrado Persistencia de sangrado

Taponamiento anterior bilateral


(hospitalización según el caso)

Persistencia de sangrado

Hospitalización Taponamiento posterior

Vigilancia de resangrado
Día quinto: Retiro de taponamiento posterior
Día sexto: retiro taponamiento anterior
24 horas más de observación
Si no resangra, salida

Ante nuevo resangrado: cirugía.


Ligadura etmoidal anterior, posterior y esfenopalatina

963
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS cream and silver nitrate cautery in the treatment


of recurrent anterior epistemic. Clin Otolaryngol
1. Herkner H, Laggner AN, Mullner M, et al. 1999; 24:228-231.
Hypertension in patients presenting with epistaxis. 4. Srinivasan V, Sherman IW, O’Sullivan G. Surgical
Ann Emerg Med 2000; 35:126-130. management of intractable epistaxis: audit of
2. Monte ED, Belmont MJ, Wax MK. Management results. J Laryngol Otol 2000; 114:697-700.
paradigms for posterior epistaxis: A comparison 5. Thaha MA, Nilssen EL, Holland S, Love G, White
of costs and complications. Otolaryngol Head Neck PS. Routine coagulation screening in the
Surg 1999; 121:103-106. management of emergency admission for
3. Murthy P, Nilssen EL, Rao S, McClymont LG. A epistaxis. Is it necessary? J Laryngol Otol 2000;
randomized clinical trial of antiseptic nasal carrier 114:38-40.

964
CAPÍTULO VII: FRACTURA NASAL

CAPÍTULO VII

Fractura nasal

Álvaro Gómez, MD
Sección de Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

GENERALIDADES PATOGÉNESIS

L a pirámide nasal es la estructura más pro-


minente de la cara. Esta característica de-
termina que las fracturas nasales sean las le-
La naturaleza y la extensión de la lesión de-
penden de las características del trauma; la
relación de fuerza por masa es uno de los ele-
siones faciales más frecuentes, llegando a re- mentos básicos en el mecanismo físico de
presentar el 50% del total. estas lesiones.

Las causas más frecuentes de fractura son La clasificación más común de las fracturas
agresiones, accidentes deportivos, acciden- nasales se deriva de la modalidad del trau-
tes de tráfico y caídas casuales. ma, bien sea frontal o lateral.

En su tratamiento inicial se observa un alto


ANATOMÍA
porcentaje de deformidad nasal postraumá-
tica, que oscila entre 14% y 50%, y que se La nariz es una estructura piramidal con vérti-
debe a: ce superior y base inferior formada por un es-
queleto osteocartilaginoso y una cobertura
• Edema postraumático. mucocutánea que contiene dos cavidades o
• Lesiones septales no diagnosticadas. fosas nasales, separadas por el tabique o
• Escasa colaboración por parte de algunos septum nasal. La pirámide puede ser dividida
pacientes. en varias subunidades: raíz nasal (vértice de
dicha pirámide), dorso nasal, paredes latera-
les, alas nasales, punta y columnela (línea
EPIDEMIOLOGÍA media de la base).

Ocurren más frecuentemente en hombres que


en mujeres, en una relación de 2:1. En los ni- CLASIFICACIÓN
ños las caídas y los traumas directos son la DE LAS FRACTURAS NASALES
causa más frecuente, y en los adultos los
accidentes de tránsito. La clasificación de Stranc categoriza las frac-
turas nasales en función de su localización
antero-posterior (fractura nasal por impacto
frontal) y de la desviación lateral:

965
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Tipo I. Son aquellas que afectan la porción HISTORIA CLÍNICA


más anterior de los huesos nasales y el tabi-
que. Antes de la exploración del paciente se pro-
cede con la historia de la causa del accidente
Tipo II. Además de afectar los huesos nasales y del estado previo del paciente.
y el tabique, presentan lesión de la apófisis
frontal del maxilar. • Estado previo del paciente: se debe interro-
gar sobre deformidades nasales o dificulta-
Tipo III. Afectan a ambas apófisis frontales del des para el paso del aire antes del acci-
maxilar y al hueso frontal, siendo en realidad dente y sobre cirugía nasal previa.
fracturas naso-etmoido-orbitarias. • Tipo de traumatismo: fecha y hora del ac-
cidente, dirección del traumatismo (frontal
La clasificación de Rohrich divide las fractu- o lateral), intensidad del mismo (agresión,
ras nasales en cinco grupos diferentes: caída, accidente de tráfico).
• Los golpes frontales directos aplicados
I. Fractura simple unilateral. sobre el dorso nasal producen fracturas de
II. Fractura simple bilateral. la parte delgada de los huesos nasales cau-
III. Fractura conminuta. sando fracturas nasoetmoidales.
a) Unilateral. • Los golpes laterales son los responsables
b) Bilateral. de la mayor parte de las fracturas nasales.
c) Frontal.
IV. Fractura compleja (huesos nasales y septo). Inicialmente se realiza inspección visual de la
a) Con hematoma septal asociado. pirámide nasal, palpación de la misma (dor-
b) Con laceraciones nasales. so, paredes laterales y espina nasal), inspec-
V. Fracturas naso-orbito-etmoidales. ción del tabique nasal y evaluación del paso
de aire por las fosas nasales.
En la practica clínica es importante el diag-
nóstico de la fractura y en nuestro medio se
debe estimular su clasificación, la cual permi- EXAMEN FÍSICO
te hacer estudios comparativos.
Se registran signos de epistaxis uni o bilate-
Las formas de presentación de las fracturas ral, edema, tumefacción nasal, hundimiento
nasales son: de las paredes laterales, desviación nasal late-
ral, depresión del dorso nasal, heridas cutá-
Fracturas nasales simples, las cuales no pre- neas, telecanto (fracturas nasoorbitoetmoida-
sentan desplazamiento de los fragmentos ni les), verticalización de las narinas (nariz porci-
deformidad del septum nasal; no requieren na) en los casos de hundimiento severo del
cirugía, sino manejo médico con ferulización. dorso nasal.
Fracturas con deformidad septal y desplaza-
miento de los fragmentos; generalmente re- Tras la inspección ocular, se procede con la
quieren reducción cerrada, y en su mayoría palpación de la pirámide, recorriendo primero
rinoplastia, en un periodo no superior a 3 el dorso nasal con los dedos en búsqueda de
semanas. escalones óseos o crepitaciones y, posterior-
mente, palpando con ambos índices las pare-
des laterales. En este momento se puede ejer-

966
CAPÍTULO VII: FRACTURA NASAL

cer presión sobre la cara lateral en dirección tiempo puede transcurrir desde el momento
medial en los casos de desviaciones latera- de la fractura hasta su reducción: 24 a 72 ho-
les y si ha transcurrido poco tiempo desde el ras como máximo; existe coincidencia en que
momento de la fractura se puede lograr una cuanto antes se intente su reducción, hay más
rápida reducción de la misma. posibilidades de éxito. Algunos médicos reco-
miendan que una vez se presenta el edema
En todo traumatismo nasal se debe realizar se debe esperar a que éste haya cedido antes
inspección del tabique para descartar hemato- de intentar la corrección.
mas septales o desviaciones del mismo; las
lesiones septales son la principal causa de Reducción cerrada de la fractura nasal: la
deformidad nasal secundaria. reducción se puede practicar bajo anestesia
local o bien bajo anestesia general.
Tras realizar vasoconstricción y anestesia tó-
pica de ambas fosas nasales, se procede con Reducción de la pirámide nasal: se procede
la aspiración de coágulos, para examinar con a desimpactar aquellos fragmentos que hayan
el rinoscopio el vestíbulo nasal, el meato infe- quedado hundidos. Para la reducción de los
rior, los cornetes y el tabique; se ha de buscar huesos nasales se dispone de dos instrumen-
cualquier laceración o hematoma del septo. tos específicos: los fórceps o pinzas de
Un hematoma septal no tratado puede produ- Walsham para desimpactar los huesos de las
cir necrosis del cartílago por despegamiento paredes laterales y los fórceps de Asch para
del pericondrio. la reducción del tabique.
Si bien la utilidad de las radiografías nasales
En ocasiones, en fracturas nasales simples
(perfil de huesos nasales y proyección de
con desplazamiento lateral, una presión ejer-
Watters) son motivo de continuada controver-
cida con los dedos en dirección opuesta pue-
sia, creemos que en los casos de duda y en
de permitir la correcta reducción.
los casos de agresiones o accidentes de tráfi-
co es conveniente realizarlas con el fin de dejar
La reducción de los huesos nasales en ocasio-
constancia gráfica.
nes produce la reducción simultánea del des-
plazamiento septal, dada la íntima relación
que tienen los cartílagos laterales con el tabi-
TRATAMIENTO INMEDIATO que, pero en cualquier caso éste ha de ser
revisado.
Una vez realizada una buena historia clínica
se orienta el manejo a definir y controlar las
Tratamiento del tabique: cuando hay hema-
dos principales urgencias de las fracturas na-
toma septal, éste debe ser drenado mediante
sales: la epistaxis y el hematoma septal.
una incisión con bisturí sobre la parte más cau-
El hematoma septal debe ser diagnosticado y dal del mismo, abriendo el mucopericondrio
drenado en las primeras 24 horas luego del para luego aspirar el hematoma; inmediata-
accidente, para evitar infección y la pérdida mente se realiza taponamiento anterior bila-
del cartílago por necrosis; en seguida se debe teral para evitar la reproducción.
realizar un buen taponamiento nasal bilateral.
Taponamiento nasal: cumple una doble fun-
Aunque ya no constituye una urgencia como ción; por una parte, hace de soporte interno
tal, parece existir acuerdo acerca de cuánto evitando que se produzca un nuevo despla-

967
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

zamiento de los fragmentos fracturados, es- Férulas nasales: la misión de las férulas es
pecialmente en las fracturas conminutas y por mantener los fragmentos alineados, disminuir
otra permite una buena hemostasia. la formación de edema y proteger la pirámide
nasal mientras se produce la estabilización de
Existen muchos métodos de taponamiento na- la fractura.
sal, tales como venda de gasa impregnada
en lubricante, tul graso, sustancias hemostá- Cuidados posteriores: se prescribe tratamien-
sicas como Spongostan®, Merocel® o Sur- to analgésico y antiinflamatorio de poca afecta-
gicel®. El taponamiento nasal debe ser reti- ción gástrica, se recomienda dormir con la ca-
rado a los 2 ó 3 días, salvo en fracturas cartila- beza elevada, a las 48 ó 72 horas se retira el
ginosas, en cuyo caso se retira a los 4 ó 5 taponamiento nasal en el centro de atención
días, cubriendo el paciente con tratamiento primaria y el paciente debe ser visto por el otorri-
antibiótico. nolaringólogo a los 7 a 10 días de la reducción,
momento en que se retira la férula externa.

ALGORITMO

Fractura nasal

Historia Clínica y Examen Físico

A. Simple Reducción cerrada


Medidas generales
Control por ORL para definir posible conducta quirúrgica
asociada a:
Epistaxis : taponamiento
Laceración nasal: lavado y sutura
Hematoma septal: drenaje y taponamiento

B. Compleja Medidas generales


Taponamiento nasal anterior
Remisión a ORL para reducción abierta de fx nasal
ORL: Otorrinolaringología

CONCLUSIÓN LECTURAS RECOMENDADAS

Siendo la epistaxis y el hematoma septal las 1. Bailey B, Healy G, Gralapp C. Head and Neck
principales complicaciones inmediatas, el Surgery: Otolaryngology. Third Edition. Lippincott
Williams & Wilkins. Philadelphia, 2001.
médico del servicio de urgencias debe tener
2. Cummings C, Krause C, Schuller D, et al.
un conocimiento claro tanto de la anatomía y Otorhynolaryngology Head and Neck Surgery.
fisiopatología, así como de su manejo. Todas Third edition. Mosby, Baltimore. 1998.
las fracturas deben ser evaluadas por el oto- 3. Gates G. Current Therapy in Otolaryngology-Head
rrinolaringólogo para establecer su manejo and Neck Surgery. Mosby. St Louis, 1997.
definitivo.

968
CAPÍTULO VIII: OTITIS MEDIA AGUDA

CAPÍTULO VIII

Otitis media aguda

Pablo Hernández, MD
Servicio de Otorrinolaringología
Clínica de Marly

Santiago Hernández, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina

E l diagnóstico y el tratamiento de las


inflamaciones e infecciones del oído con-
tinúa siendo uno de los motivos de consulta
quio, que le impide cumplir sus funciones de
equilibrar presiones, drenar fluidos y defender
el conjunto funcional; se define como otitis
más frecuentes en las salas de urgencias de media aguda cuando el cuadro clínico no tiene
nuestro país. Es de resaltar que con los nue- evolución de más de tres semanas.
vos avances científicos, los conocimientos de
la patología, la fisiopatología, la farmacología Existen diferentes y variados factores de ries-
y la inmunoterapia, la incidencia de la enferme- go, desde la infancia hasta la edad adulta y la
dad no ha tenido verdadera disminución; por ancianidad, para adquirir esta enfermedad. En
el contrario, la otitis media se diagnostica hoy la infancia pueden ser la suspensión pronta
con más frecuencia que en el pasado. de alimentación con leche materna (déficit
inmunológico y uso temprano y prolongado de
Es de conocimiento universal la clasificación biberón), inmunosupresión y alteraciones cra-
de la otitis en aguda y crónica, con base en neofaciales; más tarde, la condición de fuma-
consideraciones clínicas o histopatológicas. dor activo o pasivo, infecciones recurrentes
de la vía aérea superior, alergias y reflujo gas-
troesofágico, entre otras.
OTITIS MEDIA AGUDA (OMA)
La otitis media aguda (OMA) es la inflama- EPIDEMIOLOGÍA
ción del oído medio con o sin perforación tim-
pánica y puede afectar, como estructuras aso- La otitis es un problema de salud pública de
ciadas, a la caja timpánica, la trompa de Eusta- grandes dimensiones en Colombia. Su mane-
quio y la mastoides. jo, infortunadamente, se ha convertido en un
ejercicio simplemente asistencial que no inci-
La OMA es un proceso anormal de predominio de sobre la disminución de la prevalencia por-
infeccioso, caracterizado por la inflamación del que no hay una política clara de salud pública
oído medio o de alguna de sus partes por cau- en cuanto a promoción y prevención de la
sa de la obstrucción de la trompa de Eusta- enfermedad.

969
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La pobreza en todas sus dimensiones como • Kebsiella sp.


ocurre en Colombia, el abandono sanitario, la • Staphylococcus aureus.
guerra, las enfermedades respiratorias aso- • Enterobacter sp.
ciadas, el alto número de niños y ancianos
con desnutrición e inmunodeficiencia y los fac- En países en desarrollo como Colombia, se
tores ambientales nocivos, son algunas de las puede encontrar como causa de OMA el
causas que precipitan la aparición de otitis y Mycobacterium tuberculosis, que se caracte-
como consecuencia la discapacidad auditiva riza por la perforación múltiple de la membra-
con todas sus complicaciones. na timpánica y puede llevar a complicaciones
como parálisis facial, hipoacusia y mastoiditis.
Existen otros factores epidemiológicos como
el género -se observa mayor prevalencia en
el sexo masculino- y factores genéticos, climá- FISIOPATOLOGÍA
ticos, asociaciones con algunas patologías
virales endémicas o epidémicas, hacinamien- La causa de la OMA en los niños está directa-
to y ciertos hábitos alimentarios. mente relacionada con la inmadurez de la
trompa de Eustaquio, que es corta, horizontal
La prevalencia de la OMA varía geográfica- y de amplia luz; además, también existe in-
mente según países, áreas y departamentos madurez del sistema inmunológico en el pa-
o provincias. ciente pediátrico.

Es bien conocida la alta incidencia de OMA En el adulto, la enfermedad se manifiesta por


en niños que van a piscinas en lugares de re- disminución de la presión de los gases que
creo y vacaciones. se difunden hacia el espacio vascular, lo cual
crea una presión negativa y extravasación de
Los microorganismos que se encuentran en líquido seroso que se acumula en la caja tim-
un 90 % de los casos de OMA son: pánica; su acumulación abundante produce
elevación de la presión hidrostática y desen-
• Streptococcus pneumoniae. cadena perforación timpánica.
• Haemophylus influenzae.
• Moraxella catarrhalis.
CUADRO CLÍNICO
Existen otros microorganismos de aparición
poco frecuente que son: Las manifestaciones clínicas de la OMA son
insidiosas y severas, con presencia de mani-
• Sreptococcus pyogenes. festaciones sistémicas o sin ellas; las más fre-
• Escherichia coli. cuentes y sobresalientes para realizar una
• Pseudomonas aeruginosa. aproximación clínica son:

970
CAPÍTULO VIII: OTITIS MEDIA AGUDA

SÍNTOMAS ESPECIFICOS SÍNTOMAS NO ESPECÍFICOS/GENERALES


Otalgia Malestar general (fiebre, taquicardia, diaforesis)
Hipoacusia (en el caso de los niños puede pasar inadvertida) Cefalea
Otorrea Anorexia, vómito y diarrea
Eritema timpánico Rinorrea

En la otoscopia se observa una membrana tim- jable en primera instancia en el servicio de ur-
pánica hipervascularizada u opaca (fase hiper- gencias, pues es el segundo eslabón de la ca-
hémica), dilatada y con gas en su interior, que dena diagnóstica, reservado como procedi-
limita la otoscopia neumática (fase de transu- miento especializado en los servicios de otorri-
dado), abombamiento de la membrana timpá- nolaringología, donde se diagnostican posibles
nica (fase exudativa), o incluso se puede visua- secuelas de la infección. Lo mismo se aplica a
lizar salida de material purulento a través de las imágenes diagnósticas, que están indicadas
una perforación timpánica (fase supurativa). sólo cuando hay signos y síntomas asociados
Una vez rota la membrana timpánica desapare- que desvíen la impresión diagnóstica hacia otra
ce por completo el dolor, y la supuración se anomalía o hacia patologías asociadas.
convierte entonces en el motivo de consulta.

AYUDAS PARA EL DIAGNÓSTICO ATENCIÓN EN URGENCIAS


El principal medio de diagnóstico es la otosco- Se recomienda acudir al servicio de urgencias
pia neumática, que permite la primera obser- a todo paciente, sea cual fuere la edad, con
vación directa de la patología y puede confir- dolor y síntomas que puedan sugerir la pre-
mar el diagnóstico. Posteriormente se utilizan sencia de infección ótica aguda, para evalua-
los diapasones, en escolares, para evaluar el ción, diagnóstico y tratamiento específico, así
estado de la audición conductiva y neuro- como para remisión en caso de posibles com-
sensorial. plicaciones tanto generales como auditivas.

El hemograma está indicado en pacientes en El médico de urgencias debe explicar a los pa-
quienes se observa mal estado general o que dres del niño o al paciente adulto la importan-
tienen un factor de riesgo evidente de desarro- cia de no auto-formularse -que en Colombia
llar alguna complicación. es una práctica común-, así como el riesgo de
usar gotas que pueden agravar el cuadro, en
Se debe ordenar examen bacteriológico y cul- especial si hay perforaciones timpánicas.
tivo de las secreciones óticas y de la nasofarin-
ge en todo paciente que presente OMA a repe-
tición, o en quien el tratamiento antibiótico no TRATAMIENTO INICIAL
sea efectivo. Esto permite la racionalización
de la antibioticoterapia. TRATAMIENTO SINTOMÁTICO

El uso rutinario de la audiometría e impedan- Es uno de los pilares del tratamiento de la


ciometría en pacientes con OMA no es aconse- OMA; se basa en analgesia, por ejemplo

971
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

acetaminofén (de acuerdo al peso y edad, ca- mg y clavulanato 125 mg. La dosis en adultos
da 6 horas) asociado con descongestionan- es de 1 tableta de 500 mg cada 8 horas por 7
tes sistémicos y tópicos; éstos realmente no días. En el paciente pediátrico de 6-12 años,
contribuyen directamente a la resolución de 5 mL de la suspensión de 250 mg cada 8 ho-
la OMA, pero sí reducen los síntomas de las ras (20 mg/kg/día).
vías respiratorias altas.
Cefuroxime 30 mg/kg, 2 veces al día, vía oral
ANTIBIOTICOTERAPIA por 7 días.

Ceftriaxona (un antibiótico cefalosporínico de


Es de vital importancia que el médico general
amplio espectro), 1-2 g ó 50 mg/kg/día, IM por
tenga en cuenta los factores que contribuyen
3 días.
al aumento de la resistencia bacteriana, antes
de formular a su paciente. Éstos son: En niños que sean alérgicos a la penicilina,
algunas de las alternativas son: cefuroxime u
1. Incumplimiento del tratamiento por parte del otra cefalosporina de segunda generación o
paciente. azitromicina.
2. Germen causal sin identificación adecuada.
3. Germen sin erradicar. El médico general o el médico de urgencias
4. Interrumpir, sin autorización médica, el tra- debe remitir al otorrinolaringólogo a todo pa-
tamiento señalado. ciente con OMA en estado séptico para de-
5. Viajeros con transmisión de cepas resis- terminar la posibilidad de miringocentesis;
tentes de un lugar a otro. lo mismo se debe hacer con cada uno de los
6. Transferencia de la resistencia a través de neonatos o niños con inmunodeficiencia y con
plasmidos. los adultos inmunocomprometidos.
Las actuales opciones de tratamiento antibió- En el caso del diagnóstico de tres o más epi-
tico son: sodios de OMA en seis meses con mejoría
total entre los episodios (otitis recidivante) hay
Amoxicilina: si hay dolor, fiebre y manifesta-
que orientarse hacia un diagnóstico asociado
ciones propias de la OMA como abombamien-
de sinusitis o infecciones de la nasofaringe y
to timpánico en la otoscopia neumática. Debe
remitir al otorrinolaringólogo para el tratamien-
suministrarse en dosis de 80-100 mg/kg por
to complementario y la debida profilaxis.
día y por vía oral, durante 7 días. Las presen-
taciones comerciales son tabletas de 500 mg
Para reforzar el éxito del tratamiento se debe
o suspensión de 125 mg y 250 mg.
recomendar una adecuada nutrición y la apli-
Cuando hay recurrencia o falla del tratamien- cación del esquema de vacunación según re-
to inicial se debe administrar alguno de los comendación del plan ampliado de inmuniza-
siguientes esquemas: ción (PAI).

Amoxicilina-clavulanato: preparaciones co-


merciales (como el Clavulin) traen 125 mg de COMPLICACIONES DE LA OMA
amoxicilina en dosis diarias de 80-100 mg/kg
de peso de amoxicilina y 31,25 mg de ácido Las complicaciones de la OMA se pueden di-
clavulánico en 5 mL de la suspensión y cada vidir en dos grandes grupos: las óticas y las
tableta de 500 mg contiene amoxicilina 500 extraóticas.

972
CAPÍTULO VIII: OTITIS MEDIA AGUDA

ÓTICAS resultados esperados por el médico general,


si se registran cuadros recurrentes o si hay
• Perforación de la membrana timpánica, que alteraciones auditivas referidas por el pacien-
al cicatrizar puede dejar una placa escle- te mismo o por su familia o detectadas por el
rótica. En el caso de no cierre se requiere médico tratante.
intervención quirúrgica.
• Otitis media supurativa crónica, que requie-
re cultivos para identificar la etiología; esta PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
secreción crónica puede originar otitis ex-
terna o dermatitis del conducto auditivo La prevención de la OMA en los países en vía
externo o del pabellón auricular. de desarrollo depende de las políticas de sa-
• Hipoacusia conductiva o neurosensorial. lud pública, de las estrategias de salud comu-
• Laberintitis serosa aguda, por toxinas nitaria y de la educación de los trabajadores
bacterianas que pasan del oído medio al de la salud (incluye a médicos, enfermeras y
oído interno posiblemente por la ventana paramédicos), sin excluir la participación co-
redonda. munitaria.
• Mastoiditis aguda con invasión de las
celdillas mastoideas. Se deben promover normas de salud pública
• Parálisis del nervio facial. que ayuden a reducir la prevalencia de la OMA.
• Absceso de Bezold.
• Colesteatoma. El médico general debe incentivar, no sólo en
• Como resultado de alguna complicación o el campo clínico sino en el campo social, es-
de la asociación de complicaciones se pue- trategias de mejoramiento de calidad de vida,
de desencadenar un desenlace irreversible, enseñando y promoviendo medidas de higie-
como el retraso del desarrollo intelectual y ne como el agua potable, limpieza diaria y ade-
cognoscitivo por la pérdida auditiva y la al- cuada nutrición, buscando erradicar o dismi-
teración del lenguaje. nuir en todo lo posible los factores de riesgo
que inciden en la OMA. Igualmente, los promo-
EXTRAÓTICAS tores de salud deben adoptar estrategias de
capacitación a la comunidad, con el fin de faci-
• Absceso cerebral. litar el acceso al primer nivel de salud, que
• Osteomielitis craneofacial. indiscutiblemente es el que se ocupará en pri-
• Trombosis del seno lateral. mera instancia de esta patología y ordenará
• Meningoencefalitis. las remisiones en caso de ser pertinentes.

TRATAMIENTO INTERDISCIPLINARIO LECTURAS RECOMENDADAS

Se debe interconsultar con el pediatra en el 1. Bartlett J. Factores que contribuyen al desarrollo


de cepas resistentes. 40 conferencia ínter cien-
caso de niños menores de 2 meses, con as-
cias sobre agentes antimicrobianos (ICAAC). 2000
pecto tóxico por patología sistémica o sospe- Sep, Toronto.
cha de inmunocompromiso. 2. Castaño R. Otitis media crónica como problema
de salud pública en países en vía de desarrollo.
Se debe interconsultar con el otorrinolaringó- Acta de otorrinolaringología y cirugía de cabeza y
logo luego de un mes de tratamiento sin los cuello 2001; 29:101-108.

973
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

3. Chonmaitree T, Heikkinen T. Viruses and acute oti- 10. Mattila PS, Joki-Erkkila VP, Kilpi T, et al. Prevention
tis media. Pediatr Infect Diseases J 2000; 19:1005- of otitis media by adenoidectomy in children
1008. younger than 2 years. Arch Otolaryngol Head Neck
4. Chonmaitree T. Viral and bacterial interaction in Surg 2003; 129:163-168.
11. Mion O, de Mello JF , Lessa MM, et al. The role of
acute otitis media. Pediatr Infect Diseases J 2000;
rhinitis in chronic otitis media. Otolaryngol Head
19:24S-30S. Neck Surg 2003; 128:27-31.
5. Cruz OL, Kasse CA, Leonhart FD. Efficacy of sur- 12. Sandhu G, Saleh H, Wrigth. Amoxicilin for otitis
gical treatment of chronic otitis media. Otolaryngol media in general practice. Study raises concerns.
Head Neck Surg 2003; 128:263-266. BMJ 2000; 321: 766.
6. Fireman B, Black SB, Shinefield HR, et al. Impact 13. Sociedad Colombiana de Otorrinolaringología.
of the pneumococcal conjugate vaccine on otitis Guía de tratamiento de la otitis media aguda. Acta
media. Pediatr Infect Dis J 2003; 22:10-16. Otorrinolaringologa en cabeza y cuello 2000;
7. Guía de tratamiento de la otitis media aguda. Acta 28:1205-1225.
de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y 14. Steinman MA, Landefeld CS, Gonzales R.
Predictors of broad-spectrum antibiotic prescribing
Cuello 2000; 28:120- 122.
for acute respiratory tract infections in adult primary
8. Hendely J . Clinical practice otitis media. N Engl J care. JAMA 2003; 289:719-725.
2002; 347:1169-1174. 15. Zapalac JS, Billings K, Schwade N, et al.
9. Mandel EM, Casselbrant ML, Rockette HE, et al. Supurative complicationsof acuteotitis media in the
Systemic steroid for chronic otitis media with effu- era of antibiotic resistance. Arch Otolaryngol Head
sion in children. Pediatrics 2002; 110:1071-1080. Neck Surg 2002; 128:660-663.

974
CAPÍTULO IX: SINUSITIS AGUDA

CAPÍTULO IX

Sinusitis aguda

Augusto Peñaranda Sanjuán, MD


Martín Pinzón Navarro, MD
Sección de Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA Sinusitis crónica: más de 8 semanas de evo-


lución.

S e define como una inflamación de la


mucosa que recubre los senos parana-
sales. Usualmente no está limitada a la mu-
Sinusitis crónica recurrente: episodios agudos
más de 4 veces por año.
cosa de los senos paranasales, sino que tam-
bién afecta a la mucosa nasal. Por ello se pre-
fiere el término rinosinusitis. FISIOPATOLOGÍA
Los senos paranasales comprenden el seno
En Norteamérica, comprende el 14% de los
frontal, el maxilar, el etmoidal y el esfenoidal.
diagnósticos hechos en los servicios ambula-
Cada uno está recubierto por un epitelio ciliado
torios. Es el quinto diagnóstico más común por
seudo-estratificado con orificios de drenaje
el cual se prescriben antibióticos en los Esta-
(ostiums) que se abren a la nariz. Cualquier
dos Unidos de Norteamérica.
obstrucción de éstos conduce a la alteración
de la fisiología normal y potencialmente pue-
Cerca del 0,5% de los resfriados comunes se
de producir sinusitis.
complican con signos y síntomas de sinusitis.
En promedio, los adultos sufren 2 a 3 episo- Una capa protectora de moco cubre el epite-
dios de resfriado común por año y los niños 6 lio ciliar. El moco es movilizado constantemen-
a 8. Por consiguiente, el número absoluto de te a lo largo de vías de drenaje predetermina-
personas con signos y síntomas compatibles das hacia el ostium. La capa de moco es se-
con sinusitis es alto. cretada en determinadas cantidades y con
ciertas características especiales.

CLASIFICACIÓN La obstrucción del drenaje del seno y la re-


tención de secreciones son los eventos fun-
Sinusitis aguda: más de 7 días y menos de 4 damentales en el desarrollo de la infección
semanas de evolución. sinusal. Varios factores pueden contribuir a
la obstrucción:
Sinusitis subaguda: entre 4 y 8 semanas de
evolución. • Inflamación de la mucosa que obstruye el
ostium.

975
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Anormalidades en el sistema ciliar. La impresión clínica general es un indicador


• Anormalidades anatómicas y estructurales. diagnóstico más seguro de sinusitis aguda
• Sobreproducción de moco. bacteriana. El diagnóstico, depende de la pre-
sencia de por lo menos dos síntomas
Las infecciones virales o los daños del epitelio mayores, o un síntoma mayor y dos menores.
debilitan las defensas y facilitan la penetración
de bacterias a la mucosa sinusal. Las alergias, Síntomas mayores:
el decúbito prolongado y el uso de sondas o Dolor o presión facial.
tubos nasales, también contribuyen a la infla- Obstrucción nasal.
mación de la mucosa nasal y pueden obstruir Rinorrea purulenta.
el ostium de drenaje de los senos paranasales. Hiposmia o anosmia.

Los microorganismos patógenos en la sinusi- Síntomas menores:


tis aguda son similares a los que se encuen- Cefalea.
tran en la otitis media aguda, e incluyen: Halitosis.
Dolor dental superior.
1. Streptococcus pneumoniae (30-40% ). Tos, especialmente en niños.
2. Haemophilus influenzae (20-30%). Otalgia o presión en oídos.
3. Moraxella catarrhalis (12-20%).
4. Streptococcus pyogenes ( 3%). Como parte del examen físico se debe realizar
5. Otros patógenos encontrados menos fre- una rinoscopia anterior con un espéculo nasal
cuentemente incluyen Streptococcus sp, o con un otoscopio, con el fin principal de de-
Staphylococcus aureus, Neisseria sp. terminar la presencia de secreción purulenta
6. Los hongos se encuentran usualmente en en el meato medio. Otro síntoma es dolor a la
pacientes inmunosuprimidos y en pacien- palpación de los senos paranasales, especial-
tes con diabetes. mente del maxilar y del frontal. La transi-
luminación puede ser de ayuda, pero requiere
Esta guía se refiere exclusivamente a la sin- experiencia y puede dar un alto índice de re-
usitis de origen bacteriano. sultados falsos positivos y negativos, por lo
cual no se recomienda en la práctica clínica
general. En la inspección de la orofaringe tam-
CUADRO CLÍNICO bién se puede observar escurrimiento poste-
rior purulento.
Los síntomas de la sinusitis aguda pueden ser
inespecíficos y su diagnóstico se fundamenta
en una cuidadosa historia clínica y un buen AYUDAS DIAGNÓSTICAS
examen físico. La mayoría de los pacientes
probablemente sufren una sinusitis de causa La aspiración y el cultivo sinusal son el patrón
viral. Diferenciar la sinusitis viral de la sinusi- oro en el diagnóstico de la sinusitis bacteriana.
tis bacteriana es difícil, debido a que las infec- Sin embargo, es un procedimiento invasor, do-
ciones virales preceden a las sinusitis bacteria- loroso y que puede llevar a complicaciones y
nas. En general se dice que si los síntomas sobreinfecciones; no se realiza de manera ruti-
persisten por más de 7 días, son más severos naria. El advenimiento de la endoscopia nasal
que en la infección viral o empeoran, se pue- y sinusal ha facilitado la toma de cultivos de
de diagnosticar una sinusitis bacteriana. secreciones del meato medio, que tienen una

976
CAPÍTULO IX: SINUSITIS AGUDA

correlación bacteriológica alta con las puncio- serias (osteomielitis facial, infecciones orbita-
nes antrales y ha desplazado esta práctica. rias, infecciones intracraneanas). El uso apro-
piado de antibióticos previene la progresión
Las imágenes de los senos paranasales no se de la sinusitis aguda a crónica por la más rá-
recomiendan para el diagnóstico de rutina de pida reducción del edema de la mucosa y de
la sinusitis bacteriana no complicada. Los es- la contaminación bacteriana y el restableci-
tudios imagenológicos deben ser realizados en miento del drenaje y la ventilación de las ca-
casos atípicos, cuando hay fallas del tratamien- vidades sinusales.
to o cuando se sospechan complicaciones.
El tratamiento debe empezar con un antibióti-
El valor diagnóstico de las radiografías sim- co de bajo costo y de primera línea, como
ples de los senos paranasales es muy limita- amoxicilina o trimetropin-sulfametoxazol
do por su pobre sensibilidad y especificidad. (TMP-SMX), los cuales son efectivos en la
Evidencia radiográfica de sinusitis es frecuen- gran mayoría de los casos, logrando una erra-
temente encontrada en pacientes con infec- dicación bacteriológica en 90% de los pacien-
ciones virales. tes. No hay evidencia que demuestre supe-
rioridad de los demás antibióticos.
La tomografía axial computadorizada es el
examen radiológico óptimo para el diagnósti- La elección de un antibiótico de segunda lí-
co de patología en senos paranasales, pero nea depende de la eficacia clínica comproba-
su indicación está limitada a casos de falla en da, patrones de resistencia, dosificación, efec-
el tratamiento, complicaciones, historia repe- tos adversos, adherencia al tratamiento, pre-
tida de sinusitis o evidencia de poliposis na- sencia de alergias conocidas, respuestas pre-
sal. Se debe utilizar medio de contraste si hay vias, experiencia del médico y la relación cos-
sospecha de complicaciones intracraneanas. to–beneficio. En este grupo de antibióticos
están las cefalosporinas de segunda genera-
ción (cefuroxime, cefprozil, cefaclor), penicili-
TRATAMIENTO INICIAL nas (amoxicilina/acido cavulánico, ampicilina/
sulbactam), macrólidos (eritromicina, claritro-
El 40% de los pacientes con sinusitis bacteria- micina, azitromicina) y quinolonas (moxifloxa-
nas agudas se recuperan espontáneamente. cina, levofloxacina) y otros como la clindami-
Sin embargo, los antibióticos están indicados cina. Todos estos antibióticos han demostrado
en el tratamiento de la sinusitis, por cuanto su resultados clínicos similares y deben formular-
uso ha demostrado que reduce el tiempo de se en los casos de no respuesta previa y cuan-
la enfermedad y produce más rápida resolu- do existan las variables arriba expuestas.
ción de los síntomas. La elección se hace de
manera empírica debido a la naturaleza inva- Recientes estudios in vitro sugieren que la
sora de los métodos de cultivo de los senos amoxicilina debe ser formulada en dosis altas,
paranasales. Estudios comparativos no han 90-100 mg/kg/día, para Streptococcus
demostrado grandes diferencias entre los dis- pneumoniae resistente a la penicilina. Se re-
tintos antibióticos estudiados. comienda una duración del tratamiento de 10
días. Hay algunos estudios que apoyan el uso
El objetivo del tratamiento es detener la infec- de ciclos cortos de antibióticos, pero los re-
ción aguda antes de que progrese y prevenir sultados actualmente disponibles no son con-
la aparición de complicaciones y secuelas cluyentes.

977
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En resumen, el uso de antibióticos es reco- tran empeoramiento de los síntomas. La intro-


mendado en la sinusitis aguda bacteriana. Un ducción de la cirugía endoscópica funcional
tratamiento con amoxicilina por 10 días es de los senos paranasales ha revolucionado
efectivo en 90% de los casos, y ningún agente el abordaje quirúrgico, demostrando efectivi-
ha demostrado ser superior. Los antibióticos dad en 80-90% de los casos.
de segunda línea deben ser usados en pacien-
tes alérgicos o que no han respondido a los
de primera línea. Pacientes con episodios re- COMPLICACIONES
currentes de sinusitis aguda se pueden be-
neficiar con la prescripción de antibióticos de 1. Orbitarias
segunda línea. • Celulitis periorbitaria.
• Celulitis orbitaria.
No hay estudios publicados doble ciegos so- • Abscesos orbitarios.
bre el uso de los descongestionantes en el • Trombosis de seno cavernoso.
tratamiento de la sinusitis, pero estos medica- 2. Infecciones intracraneanas (abscesos, me-
mentos proveen alivio sintomático, por lo cual ningitis, etc).
se recomienda su utilización. Los antihistamí- 3. Infecciones óseas faciales (osteomielitis).
nicos no han demostrado ser efectivos. Teóri-
camente los de primera generación pueden
ser dañinos, debido a que su actividad anticoli- CRITERIOS DE REFERENCIA
nérgica puede causar sequedad de las muco-
sas y podría interferir con la depuración muco- El paciente debe ser referido a un especialista
ciliar. No obstante, no se dispone de estudios cuando hay sospecha o posibilidad de compli-
controlados que hayan examinado el papel de caciones. Se debe también referir cuando se
los antihistamínicos en el tratamiento de la presentan síntomas recurrentes o crónicos,
sinusitis. poliposis nasal, asociación con asma o
alergias.
Recientemente se han publicado estudios que
sugieren el uso de corticoides tópicos intrana- Las complicaciones que ameritan referencia
sales para el tratamiento de la sinusitis aguda a un otorrinolaringólogo son la progresión de
bacteriana, pero la literatura es limitada al res- los síntomas, las fallas en el tratamiento, los
pecto. Los corticoides sistémicos no han de- pacientes inmunocomprometidos o el desa-
mostrado que mejoren la respuesta clínica. rrollo de infección nosocomial.

Las irrigaciones nasales con solución salina


pueden beneficiar, mejorando los síntomas, PRONÓSTICO
pero no han demostrado que disminuyan el
tiempo de enfermedad. Por sus pocos efec- En general el pronóstico es bueno, con un pro-
tos secundarios se recomienda su uso. medio de respuesta clínica favorable de 90%.
El índice de aparición de complicaciones os-
La cirugía puede estar indicada en pacientes cila entre 3% y 4%, pero hay que tenerlas en
con sinusitis aguda para facilitar el drenaje de cuenta porque tienen un alto índice de morbi-
los senos involucrados, y debe considerarse lidad y, en el caso de algunas complicacio-
en complicaciones y en los pacientes que no nes, una alta tasa de mortalidad.
respondan al tratamiento médico o que mues-

978
CAPÍTULO IX: SINUSITIS AGUDA

PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN Recommendations of a clinical advisory committee


on pediatric and adult sinusitis. Ann Otol Rhinol
Se recomienda el uso de irrigaciones nasales Laryngol 2000; 109:1-20.
2. Hickner J, Bartlett J. Principles of appropriate
con solución salina y descongestionantes na-
antibiotic use for acute rhinosinusitis in adults:
sales en las infecciones respiratorias agudas vi- background. Ann Int Med 2001; 134:499-505.
rales, con el fin de prevenir sus complicaciones, 3. Kaliner M, Ogusthorpe J, Fireman P, et al. Sinusi-
como la sinusitis aguda. Así mismo, se re- tis: bench to bedside. Current findings, future
comienda el tratamiento de enfermedades aso- directions. J All Clin Inm 1997; 99:829-848.
ciadas como alergias, asma bronquial y factores 4. Lanza D, Kenedy D. Adult rhinosinusitis defined.
anatómicos asociados. No está clara la efec- Otolar Head Neck Surg 1997; 117:1-7.
tividad de la vacuna contra el neumococo en la 5. Low D, Desrosiers M, McSherry J, et al. A practical
guide for the diagnosis and treatment of acute si-
reducción de las infecciones sinusales, pero teó-
nusitis. Can Med Assoc J 1997; 156:1-14.
ricamente podrían disminuir su incidencia. 6. Sinus and allergy health partnership. Antimicrobial
treatment guidelines for acute bacterial rhinosinu-
sitis. Otolar Head Neck Surg 2000; 1:15-36.
LECTURAS RECOMENDADAS 7. Sociedad Colombiana de Otorrinolaringología.
Guía de tratamiento de la sinusitis aguda. Acta
1. Brook I, Gooch WM , Jenkins SG, et al. Medical otorrinolaringologa cir cabeza y cuello 2000; 1015-
management of acute bacterial sinusitis. 1065.

979
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO X

Supraglotitis y epiglotitis aguda

Martín Pinzón Navarro, MD


Sección Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

D esde que Michel describió por primera vez


la “angina epiglotídea anterior” en 1878,
la epiglotitis aguda ha sido reconocida como
neo y sembrarse en la supraglotis, meninges,
piel facial, pulmones o articulaciones.

una enfermedad rápidamente progresiva que Otros patógenos causales son:


puede amenazar la vida y que afecta a niños 1. Estreptococo betahemolítico del grupo A.
en la mayoría de los casos, aunque también 2. Staphylococcus aureus.
puede presentarse en adultos. 3. Streptococcus pneumoniae.
4. Hemophilus parainfluenzae.
Es una celulitis bacteriana de las estructuras 5. Pseudomona sp.
de la supraglotis, que puede obstruir comple- 6. Klebsiella sp.
tamente la vía aérea superior. Clásicamente 7. Virus.
ocurre en niños entre los 2 y los 6 años, pero 8. Candida.
puede ocurrir en cualquier edad. Su inciden-
cia aumenta en épocas de invierno. Otras causas inusuales incluyen la utilización
de cocaína, la enfermedad de Kawasaki y le-
Antes de la vacunación masiva para Hemophi- siones térmicas. También se ha descrito una
lus influenzae tipo B (HIB), la incidencia era epiglotitis crónica en la infección por el virus
de 6 a 34 por 100.000 niños. Muchos centros de la inmunodeficiencia humana (VIH).
han reportado un descenso en enfermedades
causadas por HIB después de la iniciación de
la vacunación. CUADRO CLÍNICO
Los tres signos más comunes son: fiebre de
inicio súbito, dificultad para respirar e irritabi-
FISIOPATOLOGÍA lidad. Los niños usualmente llegan con apa-
riencia tóxica, con signos clínicos de obstruc-
El organismo causal más común es el Hemo- ción de la vía aérea superior, estridor inspira-
phylus influenzae tipo B (HIB), identificado en torio, taquipnea y sialorrea; hay disfagia y el
mas de 90% de los casos. Puede ser parte de habla se ve limitada por el dolor.
la flora normal de la faringe o puede ser adqui-
rida por contaminación respiratoria. Los micro- Debido a la obstrucción respiratoria, asumen
organismos pueden entrar al torrente sanguí- una posición apoyados hacia delante y como

980
CAPÍTULO X: SUPRAGLOTITIS Y EPIGLOTITIS AGUDA

olfateando (“posición en trípode”). Puede ocu- 4. Amigdalitis aguda.


rrir laringo-espasmo con aspiración de secre- 5. Abscesos periamigdalino o retrofaringeo.
ciones en una vía aérea que ya está obstruida, 6. Difteria.
lo cual puede progresar a paro respiratorio. 7. Cuerpo extraño faríngeo.

DIAGNÓSTICO TRATAMIENTO
Se debe reconocer la emergencia de la vía El objetivo principal es asegurar la vía aérea.
aérea y prevenir la obstrucción, el diagnóstico Si no está comprometida y se sospecha epi-
se hace por inspección directa de la laringe glotitis se debe vigilar al paciente en un sitio
en un ambiente controlado, usualmente en sa- donde existan las facilidades para manejar la
las de cirugía y con la presencia de un anes- emergencia, que puede requerir intubación
tesiólogo. con critotiroidotomia y/o traqueostomia. El pa-
ciente naturalmente asume su posición para
En un paciente que coopera se puede ver la maximizar la ventilación y toda maniobra que
faringe sin baja lenguas para descartar amig- ponga en riesgo una vía aérea ya parcialmente
dalitis o abscesos faríngeos. En estos pacien- obstruida está contraindicada.
tes están contraindicados los intentos por
visualizar la faringe en el servicio de urgen- Cualquier conducta que haga llorar al paciente
cias o en un consultorio sin contar el equipo puede precipitar la obstrucción de la vía aérea;
para manejar la obstrucción de la vía aérea. se debe evitar en lo posible extraer muestras
de sangre, desvestir al paciente, examinar la
Las radiografías laterales de cuello pueden ser faringe, inmovilizarlo para tomar radiografías,
útiles para el diagnóstico, pero durante su rea- separarlo de los padres y, especialmente, co-
lización se debe disponer de todo el equipo locarle líneas intravenosas.
para manejo de la vía aérea; se puede visuali-
zar una epiglotis engrosada y redondeada Se debe estabilizar la vía aérea en conjunto
(signo del dedo pulgar) con una subglotis entre el pediatra, el otorrinolaringólogo y el
normal. anestesiólogo, idealmente en una sala de ciru-
gía o en una unidad de cuidado intensivo, pero
Con el paciente en la sala de cirugía se pro- siempre estando preparados para cualquier
cede con el examen físico, que permite ver la urgencia. Algunas publicaciones recomiendan
supraglotis eritematosa, edematosa y con gra- la intubación de rutina en todos los pacientes
dos variables de obstrucción. Los cambios en con epiglotitis; en el momento de la intubación
la mucosa van desde eritema hasta franca ne- se deben obtener muestras de la epiglotis para
crosis; en raras ocasiones se pueden ver abs- cultivo y tomar hemocultivos, los cuales pue-
cesos de la cara lingual de la epiglotis. den ser positivos para HIB hasta en 90-95%
de los casos.

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Se debe iniciar antibiótico intravenoso; históri-


camente la epiglotitis se ha manejado con am-
1. Laringotraqueítis o croup. picilina y cloranfenicol. Se han descrito cepas
2. Traqueítis bacteriana. de HIB productores de betalactamasa, por lo
3. Uvulitis. cual hoy se recomiendan antibióticos estables

981
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ante las betalactamasas, como el ceftriaxone Los contactos de los pacientes deben ser ma-
(100 mg/kg/día), cefotaxime (100 mg/kg/día) nejados en forma profiláctica con rifampicina
o ampicilina-sulbactam (200 mg/kg/día); la du- 20 mg/kg/día.
ración del tratamiento es usualmente de 10 a
14 días, complementado con antibióticos En el siguiente algoritmo se resume el mane-
orales. jo de la epiglotitis.

La administración de corticoides sistémicos es


controversial y no se ha demostrado su LECTURAS RECOMENDADAS
eficacia.
1. Bell CM, Redelmeier DA. Mortality among patients
La extubación usualmente se logra a las 48 a admitted to hospitals on weekends as compared
72 horas; los criterios son mejoría del edema with weekdays. N Engl J Med 2001; 345: 663-668.
2. Chan KO, Pang YT, Tan KK. Acute epiglottitis in
y escape de aire alrededor del tubo endotra-
the tropics: is it an adult disease?. J Laryngol Otol
queal. La mejor guía es la visualización de la 2001; 115:715-718.
supraglotis con laringoscopio flexible. 3. Cumming C. Otolaryngology, Head and Neck
Surgery. En C Cumming, C Krause, L Harker. Third
edition. Mosby. St Louis, 1998.
COMPLICACIONES 4. Franz T, Rasgon B, Quesenberry CP. Acute
epiglottitis in adults: analysis of 129 cases. JAMA
La epiglotitis puede dar lugar a infecciones si- 1994; 272:1358-1360.
5. Garpenholt O, Hugosson S, Fredlund H, Bodin L,
multáneas en diversos sitios del cuerpo, sien-
Olcen P. Epiglottitis in Sweden before and after
do la neumonía la mas frecuente y, en menor introduction of vaccine against Haemophilus
porcentaje, meningitis, adenitis cervical, peri- influenzae type b .Pediatr Infect Dis J 1999;
carditis, artritis séptica y otitis media. 18:490-493.
6. Goldhaber SZ. Administration of epinephrine by
Pueden presentarse complicaciones secunda- emergency medical technicians. N Engl J Med
rias a la hipoxia, como daño en el sistema ner- 2000; 342:822.
vioso central, la liberación de la obstrucción 7. Parsons DS, Smith RB, Mair EA, Dlabal LJ. Unique
case presentations of acute epiglottic swelling and
súbita de la vía aérea puede producir edema
a protocol for acute airway compromise.
pulmonar. Laryngoscope 1996; 106:1287-1291.
8. Sack JL, Brock CD. Identifying acute epiglottitis in
adults. High degree of awareness, close
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN monitoring are key. Postgrad Med 2002; 112:81-
86.
En los países en que la vacunación contra HIB 9. Stroud RH, Friedman NR. An update on
es parte de un programa de salud obligatorio, inflammatory disorders of the pediatric airway:
epiglottitis, croup, and tracheitis. Am J Otolaryngol
como en Suecia, se registra una disminución
2001; 22:268-275.
importante en la incidencia de la supraglotitis, 10. Tanner K, Fitzsimmons G, Carrol ED, et al.
por lo cual se recomienda esta medida como Haemophilus influenzae type b epiglottitis as a
componente de los programas de promoción cause of acute upper airway obstruction in children.
y prevención de la salud. BMJ 2002; 325:1099-1101.

982
CAPÍTULO XI: FARINGO-AMIGDALITIS AGUDA

CAPÍTULO XI

Faringo-amigdalitis aguda

Martín Pinzón Navarro, MD


Sección Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

Augusto Peñaranda Sanjuán, MD


Sección Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

L as faringitis agudas representan aproxima-


damente entre 1% y 2% de las visitas de
pacientes ambulatorios a los servicios de ur-
La faringitis aguda es predominantemente una
enfermedad de niños entre los 5 y los 15 años
de edad. La faringitis por SBHGA en pacien-
gencias y servicios de consulta externa. Un tes pediátricos comprende un 30 % de los ca-
amplio rango de agentes infecciosos produce sos, afectando más a los niños en edad esco-
faringitis aguda, pero los virus son la causa lar; con frecuencia se presenta de manera epi-
más común. démica, con la aparición de varios casos en
una misma familia.
La gran mayoría de los pacientes que consul-
tan por dolor de garganta tienen faringitis agu-
da infecciosa de tipo viral. Entre el 5% y el FISIOPATOLOGÍA
15% son causadas por Estreptococo betahe-
molítico del grupo A (SBHGA), pero es impor- Entre 80% y 90% de las faringitis agudas son
tante descartar otras etiologías, como la farin- de etiología viral. Cientos de virus, muchos
gitis por gonococo, el virus de Epstein-Barr e de los cuales no producen inmunidad pueden
infecciones agudas por virus de inmunodefi- infectar la faringe:
ciencia humana (VIH).
1. Rhinovirus.
En la mayoría de los pacientes es una infec- 2. Coronavirus.
ción autolimitada y muy rara vez produce se- 3. Adenovirus (tipos 17, 9, 14, 16 y 21).
cuelas significativas. 4. Parinfluenza (tipo 14).
5. Influenza (A y B).
Se ha observado una formulación indiscrimi- 6. Herpes simple (1 y 2).
nada de antibióticos en el 75% de los casos 7. Cocksackie A y B ( tipos 16, 8, 10, 16 y 22).
de faringitis aguda. Este mal uso de los anti- 8. Epstein-Barr.
bióticos puede llevar a consecuencias negati- 9. Citomegalovirus.
vas, tanto para el individuo como para la sa- 10. Virus de inmunodeficiencia humana tipo 1
lud pública en general. (VIH-1).

983
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las faringitis bacterianas agudas son menos 1. Exudados amigdalinos.


frecuentes, pero tienen mucha importancia en 2. Adenopatía cervical anterior dolorosa o
cuanto a su manejo puesto que su identifica- linfadenitis.
ción y tratamiento temprano pueden prevenir 3. Ausencia de tos.
la aparición de complicaciones generales co- 4. Fiebre.
mo fiebre reumática y glomerulonefritis post-
estreptocócica y locales como adenitis supura- La presencia de 3 ó más de estos criterios
tivas, abscesos cervicales, abscesos peria- tiene un valor predictivo positivo de 40-60%.
migdalianos y parafaríngeos. Con sólo 1 de estos criterios se tiene un factor
predictivo negativo de 80%. Comparados con
Los agentes bacterianos más frecuentes son: los cultivos faríngeos, estos criterios clínicos
tienen sensibilidad y especificidad de 75% y
1. Estreptococo beta hemolítico del grupo A. 75%.
2. Micoplasma sp.
3. Arcanobacterium haemolyticus.
4. Streptococcus pyogenes grupos B y G. AYUDAS DIAGNÓSTICAS
5. Chlamydia pneumoniae.
6. Neisseria sp. En nuestro país las pruebas serológicas para
7. Corynebacterium sp. muchos virus no están disponibles, excepto
8. Anaerobios. para el Epstein-Barr. Existe una prueba rápi-
9. Otros (raros, menos del 1%). da (Monotest®) y la prueba de anticuerpos
heterófilos, prueba en la cual los títulos mayo-
res de 1/56 son diagnósticos de mononu-
CUADRO CLÍNICO cleosis.

En los casos de etiología viral el cuadro gene- Existen varias pruebas rápidas para SBHGA
ralmente va precedido o acompañado de sín- que detectan el antígeno A del estreptococo,
tomas de rinitis y tos, excepto en los casos de con sensibilidad y especificidad de 65-91% y
infección por Epstein–Barr y citomegalovirus, 62-97%, respectivamente, dependiendo del
en los cuales el cuadro clínico es similar al de tipo de prueba y de la calidad de la técnica. Si
una infección bacteriana. Usualmente tienen es positiva, se debe iniciar tratamiento antibió-
un periodo de incubación que va desde 12 tico. Si es negativa, es mejor proceder con un
horas hasta 4 días, con fiebre alta de inicio cultivo faríngeo para confirmar el diagnóstico,
súbito, dolor de garganta con faringe y amig- ya que puede tratarse de un falso negativo.
dalas de color rojo intenso, aspecto inflamato- La infección por Clostridium difteriae puede
rio y/o exudado en su superficie, cefalea, náu- detectarse por anticuerpos fluorescentes y
seas y vómito. Puede haber dolor abdominal mediante cultivo, informando al laboratorio la
y adinamia. El eritema no exudativo de la fa- sospecha clínica de difteria. Los cultivos farín-
ringe con lesiones vesiculares o ulcerativas geos son el “patrón oro” de la faringitis aguda
sugiere causa viral. bacteriana y tienen una sensibilidad y una
especificidad cercana al 90%.
El valor predictivo más importante para el diag-
nóstico de faringitis aguda bacteriana reside En resumen, si hay sospecha clínica de infec-
en los criterios clínicos de Centor: ción bacteriana se debe pedir prueba rápida
de antígeno de SBHGA; si la prueba es positi-

984
CAPÍTULO XI: FARINGO-AMIGDALITIS AGUDA

va se recomienda iniciar tratamiento y si es ne- El antibiótico de elección en la faringitis bacte-


gativa se recomienda tomar cultivo, iniciar anti- riana por SBHGA debe ser uno de bajo espec-
bióticos empíricamente y esperar resultados. tro que incluya sensibilidad, siendo la penicili-
Puede haber falsos positivos en casos de por- na la primera elección. (No hay gran evidencia
tadores de SBHGA. Algunos estudios sugieren de resistencia del SBHGA a la penicilina). En
que en estos casos se pidan títulos de anti- pacientes alérgicos, la eritromicina es una
cuerpos anti-exoenzimas estreptocócicas. opción en lugares con índice bajo de resisten-
cia. Hay varias alternativas de tratamiento que
El cuadro hemático puede ser útil para el diag- incluyen cefalosporinas de segunda genera-
nóstico diferencial entre infección viral y bacte- ción, amoxicilina/ ácido clavulánico, clindami-
riana. Un recuento de leucocitos menor de cina, azitromicina, claritromicina; todos han
12.500/ mm3 es raro en niños con infección probado ser efectivos en la erradicación del
por SBHGA. La presencia de más de 10% de SBHGA.
linfocitos atípicos puede ser signo de mono-
nucleosis infecciosa. El esquema recomendado es:

Penicilina benzatínica: 1.200.000 U IM para


TRATAMIENTO adultos y personas con peso superior a 30 kg.
600.000 U IM para niños y personas con peso
PRINCIPIOS: menor de 30 kg.
Penicilina: V-K 500 mg cada 6 hrs por 10 días.
1. Evaluar clínicamente a todos los pacien-
tes con los criterios de Centor.
2. No hacer pruebas a pacientes con sólo uno COMPLICACIONES Y PRONÓSTICO
o dos criterios positivos. Es muy probable
que no tengan faringitis de origen bacte- La mayoría de las faringoamigdalitis agudas
riano. son autolimitantes y no dejan secuelas, las
3. En pacientes con tres o más criterios clíni- infecciones por SBHGA pueden llevar a la
cos, utilizar antibióticos. Practicar pruebas aparición de fiebre reumática y/o glomerulo-
de diagnóstico rápido: si son positivas, se nefritis aguda. Puede haber diseminación re-
confirma el diagnóstico clínico y si son ne- gional de la infección y presentarse adenitis
gativas, se recomienda utilizar antibióticos supurativas cervicales, abscesos periamigda-
y realizar un cultivo faríngeo. lianos o retrofaríngeos, los cuales constituyen
4. Administrar analgésicos, anti-inflamatorios, motivo de referencia al especialista.
como acetaminofen o ibuprofeno, medidas
de soporte en todos los pacientes con farin-
gitis aguda. PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
La evidencia científica de estudios realizados La faringitis aguda y sus complicaciones son
con la administración de penicilina intramus- más frecuentes en grupos socioeconómicos
cular demuestra que el tratamiento apropiado en desventaja. El grado de contagio alcanza
con antibióticos previene la aparición de fiebre su máximo durante la infección aguda y dis-
reumática. Sin embargo, otros antibióticos y minuye en forma gradual en semanas.
otras vías de administración son igualmente
efectivos.

985
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS test: evidence of spectrum bias. Ann Emerg Med


2001; 38:648-652.
5. Johnson DR, Kaplan EL. False-positive rapid
1. Bessen DE, Carapetis JR, Beall B, et al.
antigen detection test results: reduced specificity
Contrasting molecular epidemiology of group A in the absence of group A streptococci in the upper
streptococci causing tropical and nontropical respiratory tract. J Infect Dis 2001; 183:1135-1137.
infections of the skin and throat. J Infect Dis 2000; 6. Little P, Gould C, Williamson I, et al. Clinical and
182:1109-1116. psychosocial predictors of illness duration from
2. Bisno AL, Gerber MA, Gwaltney GM, et al. Practice randomized controlled trial of prescribing strategies
for sore throat. BMJ 1999; 319:736-737.
guidelines for the diagnosis and management of
7. Sociedad Colombiana de Otorrinolaringología.
group A Streptococcal pharyngitis. Clin Inf Dis Guía de tratamiento de la faringitis aguda. Acta
2002; 35:113-125. otorrinolaringologa cir cabeza y cuello 2000;
3. Cooper RJ, Hoffman JR, Bartlett JG, et al. 28:1015-1065.
Principles of appropriate antibiotic use for acute 8. Snow V, Mottur C, Hickner JM. Principles of
pharyngitis in adults: background. Ann Int Med appropriate antibiotic use for acute pharyngitis in
adults. Ann Int Med 2001; 134:506-508.
2001; 134:509-517.
9. Zwart S, Sachs AP, Ruijs GJ, et al. Penicillin for
4. Dimatteo LA, Lowenstein SR, Brimhall B, et al. The acute sore throat: randomised double blind trial of
relationship between the clinical features of seven days versus three days treatment or placebo
pharyngitis and the sensitivity of a rapid antigen in adults. BMJ 2000; 320:150-154.

986
CAPÍTULO XII: SORDERA SÚBITA

CAPÍTULO XII

Sordera súbita

Juan Manuel García Gómez, MD


Jefe, Sección Otorrinolaringología
Fundación Santa Fe de Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

S e calcula en cerca del 1% la incidencia


de hipoacusia neurosensorial. En los Es-
tados Unidos la incidencia se estima en 5-20
inflamación neural, cambios degenerativos del
órgano de Corti, membrana tectoria y estrías
vasculares.
casos por 100.000 personas y en el mundo
se cree que se presentan 15.000 nuevos ca- Sin embargo, siempre se deben tener en cuen-
sos por año. ta las causas que aparecen en la Tabla 1.

FISIOPATOLOGÍA Tabla 1. Causas de Sordera Súbita

La sordera súbita implica un compromiso neu- a) Infecciosas:


rosensorial que puede originarse en el oído - Meningitis - Sífilis - Epstein-Barr
- Micoplasma - Paramixovirus - VIH
interno (coclear), o en el octavo par craneal y
- Herpes virus - Rubéola - Parotiditis
en las vías auditivas (retrococlear). Se define - Citomegalovirus - Parainfluenza A/B - Sarampión
como la pérdida neurosensorial de 30 deci-
beles o más, en tres frecuencias continuas y b) Traumáticas:
en menos de tres días. La mayoría de pacien- - Fístula perilinfática.
tes presentan una sordera que puede ser de - Fractura del hueso temporal.
minutos o de varias horas de duración; gene- - Enfermedad por descompresión (barotrauma).
ralmente es unilateral y excepcionalmente bi- - Cirugía otológica.
- Complicaciones quirúrgicas de otras cirugías.
lateral.
c) Neoplásicas:
En la hipoacusia neurosensorial súbita idiopá- - Neurinomas del acústico.
tica (HNSSI) se desconoce el mecanismo fisio- - Tumores del ángulo pontocerebeloso.
patológico exacto que produce la pérdida audi- - Leucemia.
tiva, lo cual limita la realización de un trata- - Mieloma.
miento específico efectivo. Se cree que las - Metástasis del canal auditivo externo.
infecciones virales son la causa más frecuen- - Carcinomatosis meníngea.
te, seguida por las rupturas de la membrana
d) Inmunológicas:
coclear y fenómenos vasculares. Se han ob- - Enfermedad autoinmune del oído interno.
servado cambios inducidos por virus, como - Arteritis temporal.

987
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

- Granulomatosis de Wegener. Las pérdidas auditivas leves pueden pasar


- Síndrome de Cogan. desapercibidas y, por lo tanto, el médico de
- Poliarteritis nodosa. urgencias debe estar alerta y sospecharlas en
- Lupus eritematoso sistémico.
pacientes que consultan por acúfenos unila-
e) Tóxicas: terales, sensación de oído tapado o disminu-
- Mordedura de ofidios. ción súbita en la audición. Aproximadamente
una tercera parte de los pacientes se despier-
f) Ototóxicas: tan con el cuadro instaurado. En la mayoría
- Macrólidos. de los casos la mejoría se observa en las dos
- Aminoglucósidos. primeras semanas.
- Cisplatino.
- Furosemida.
- Salicilatos. Ante cualquier duda frente a una HNSSI, la
- AINES (Antiinflamatorios no esteroideos) única forma de confirmarla es mediante una
- Interferón. audiometría. En la siguiente gráfica se obser-
va una hipoacusia neurosensorial profunda del
g) Vasculares: oído izquierdo.
- Alteraciones de la microcirculación.
- Insuficiencia vertebro-basilar.
- Esferocitosis.
- Vasoespasmo.
- Síndromes de hipercoagulabilidad. FRECUENCIA EN HERTZ
- Anomalías de la arteria carótida. I
N
h) Neurológicas: T
E
- Esclerosis múltiple. N
- Isquemias focales. S
- Migraña. I
D
A
i) Metabólicas: D
- Hipocalemia. D
- Trastornos en el metabolismo del hierro. E
- Diabetes mellitus. C
I
- Insuficiencia renal. B
E
j) Otros factores: L
E
- Enfermedad de Meniére. S
- Neurosarcoidosis.
- Cirugía dental.
- Predisposición genética.
- Anestesia raquídea.
- Cirugía de la columna cervical. AYUDAS DIAGNÓSTICAS
Historia clínica y examen físico: la historia
CUADRO CLÍNICO clínica debe ser minuciosa y orientada al diag-
nóstico diferencial (Tabla 1), teniendo en
Es muy variable; aproximadamente 2/3 partes cuenta:
de los pacientes mejoran sin tratamiento algu-
no, especialmente aquellos con sordera leve • La circunstancia exacta y las característi-
o moderada. cas de la pérdida auditiva.

988
CAPÍTULO XII: SORDERA SÚBITA

- Los antecedentes traumáticos, enfermeda- El otorrinolaringólogo determinará en cada


des asociadas y la exposición a sonidos caso específico qué batería de exámenes se
intensos (trauma acústico). requiere para el estudio completo del paciente.
- Episodios de tinitus, vértigo y presión aural.

El examen físico en la mayoría de los casos ATENCIÓN PREHOSPITALARIA


es normal.
Se debe:
Otoscopia: descarta obstrucción del conducto • Evitar la manipulación de los oídos.
auditivo externo, lesiones timpánicas y anor- • Evitar trauma acústico.
malidades del oído medio. Tal obstrucción de- • Suspender cualquier medicamento
be ser descartada mediante lavado del ceru- ototóxico.
men, que es la causa más frecuente de hipo- • La autoformulación y los tratamientos ca-
acusia. Es importante anotar que en la HNSSI seros.
la otoscopia es completamente normal.

Diapasones: se utilizan principalmente los TRATAMIENTO INICIAL


diapasones de 256 y 512 Hertz para realizar
las pruebas de Weber y Rinne, las cuales se Cuando la causa ha sido identificada el trata-
presentarían como: Weber, que lateraliza el miento es específico. En los pacientes con
mejor oído, y Rinne bilateral, hallazgos carac- HNSSI y debido a que no existe una etiología
terísticos de la hipoacusia neurosensorial. definitiva, se recomiendan los corticoesteroi-
des de manera empírica; el uso de antivirales
Voz: enmascarando el oído sano mediante el no ha demostrado su eficacia.
ruido producido por una hoja de papel frotada
contra el pabellón auricular y hablando en voz Se recomienda utilizar metil-prednisolona o
cuchicheada en el oído enfermo, se puede prednisolona en dosis de 1 mg/kg/día por vía
diagnosticar la HNSSI. oral durante 10 a 14 días. Existe la posibilidad
de su aplicación intratimpánica, la cual evita
Examen neurológico y de pares craneanos: efectos sistémicos, en este caso el paciente
especialmente útil si la sordera se asocia con debe estar en reposo durante las primeras 48
vértigo. Se deben descartar síndromes verti- horas.
ginosos centrales en los pacientes de la ter-
cera edad con factores de riesgo, y descartar El vértigo es de manejo sintomático según
accidentes cerebrovasculares de la fosa pos- protocolos establecidos.
terior (territorio vertebrobasilar).
La sordera neurosensorial súbita bilateral es
En el servicio de urgencias no se requieren muy rara y debe ser referida al especialista.
otros exámenes paraclínicos, excepto en los En los casos en que no hay recuperación de
casos en que se deban descartar otras cau- la audición, se recomienda el tratamiento qui-
sas de hipoacusia neurosensorial (Tabla 1) rúrgico con implante coclear.
que requieran valoración urgente.

989
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FLUJOGRAMA

SORDERA SÚBITA

OTOSCOPIA

NORMAL
ANORMAL
Excluir:
Asociada a otros síntomas:
Exposición a sonidos intensos
(vértigo, tinitus, taponamiento ótico)
Drogas ototóxicas, Qx oído. TCE

Tapón de cerumen
Realizar
Cuerpo extraño
AUDIOMETRÍA
Otitis externa
Si confirma el
Otitis media
Dx

Tener en cuenta
factores de
buen y mal
pronóstico

Iniciar Tto con


Prednisolona
dosis 1mg/kg día
durante 10 días

Remitir a ORL
para descartar
Dx diferenciales

CRITERIOS DE REFERENCIA
• Sordera súbita bilateral. mejorar sin tratamiento. A continuación se
• Contraindicación en el uso de cortico- describen algunos criterios.
esteroides.
• Cuando la posible etiología sea de origen: Buen pronóstico:
- Traumático - Tratamiento y evaluación temprana (dentro
- Neoplásico las primeras 48 horas).
- Inmunológico - Recuperación dentro de las primeras 2
- Tóxico semanas.
- Vascular - No presenten vértigo ni tínitus.
- Neurológico - Hipoacusia neurosensorial leve o
- Metabólico moderada.

Mal pronóstico:
PRONÓSTICO - VSG aumentada.
- Sordera neurosensorial profunda (>90
Como se mencionó anteriormente, las 2/3 decibeles).
partes de los pacientes con HNSSI pueden - Bilateral.

990
CAPÍTULO XII: SORDERA SÚBITA

PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN LECTURAS RECOMENDADAS

Cuando se encuentren pacientes con exposi- 1. Chandrasekhar S. Intratympanic dexamethasone


ción a sonidos intensos (trauma acústico) y for sudden sensorineural hearing loss. Clinical and
presencia de alguna enfermedad asociada, laboratory evaluation. Otolo Neurotol 2001; 22:18-
23.
como las arriba enumeradas, se debe realizar
2. Gordon B, Michael A, Freedman D, et al. Sudden
tamizaje de la audición y hacer cumplir la le- neurosensorial hearing loss. Otolaryngol Clin N Am
gislación laboral existente en relación con 1996; 3:393-405.
protección auditiva. 3. Parnes L, Sun A, Freeman D. Corticosteroid
pharmacokinetics in the inner ear fluids: An ani-
La incidencia de sordera neurosensorial es de mal study followed by clinical aspplication.
3 por 1.000 nacimientos y, por lo tanto, se re- Laryngoscope 1999; 109:1-14.
comienda que todo recién nacido tenga una 4. Stephen E, James S. Sensorineural hearing loss.
Ped Clin N Am 1989; 36: 1501-1519.
prueba de tamizaje auditivo, preferiblemente
realizada con potenciales evocados auditivos
automatizados y que a todo niño en edad es-
colar se le practique una audiometría anual
hasta los 12 años.

991
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIII

Trauma maxilofacial

Andrés Pauwels, MD
Karina Sarmiento, MD
Guillermo Gracia, MD
Departamento de Odontología
Sección cirugía Maxilofacial
Fundación Santa Fe de Bogotá
INTRODUCCIÓN

E n Colombia el trauma maxilofacial repre-


senta un problema de salud y social de
significación. El trauma maxilofacial afecta los
En el manejo de las heridas maxilofaciales de
los tejidos blandos de la región maxilofacial
se siguen los principios generales de trata-
tejidos blandos y tejidos duros faciales, com- miento especializado; el manejo no se con-
promete la piel, el cuero cabelludo, la región centra únicamente en el cierre de la herida
frontal, la región orbitaria, la región geniana y para prevenir infecciones y mejorar la estéti-
cigomática, la región nasal, la región labial y ca, sino que incluyen procedimientos dirigidos
la región mandibular. Las estructuras óseas y a restaurar la forma y la función. Con diag-
dentales pueden presentar fracturas aisladas nóstico y manejo apropiados, los efectos cos-
y combinadas que empeoraran el cuadro méticos y funcionales postraumáticos se re-
clínico. ducen significativamente.

El manejo inicial se hace según las recomen-


daciones del Manual ATLS (Advanced Trauma FRECUENCIA
Life Support) para el manejo de las heridas.
En Colombia más de 700.000 pacientes acu-
Los principios de tratamiento de las fracturas den cada año a los servicios de urgencias por
faciales son iguales a los de otras estructuras trauma maxilofacial primario o secundario, de-
del esqueleto óseo. Las partes óseas deben rivado principalmente de accidentes vehicula-
ser alineadas (reducción) y mantenidas en po- res y de violencia y asaltos.
sición (inmovilización o estabilización) por el
tiempo suficiente para que el hueso cicatrice.
ETIOLOGÍA Y FISIOPATOGENIA
En la evolución y resultado final del trauma
maxilofacial influyen factores importantes, ta- Los accidentes vehiculares y los asaltos ca-
les como la edad, el estado general del pacien- llejeros son las causas más frecuentes. Otras
te, la presencia de enfermedades concomi- causas son los accidentes caseros, los acci-
tantes, la complejidad de las fracturas, así dentes deportivos y recreacionales, los acci-
como la idoneidad del profesional que las tra- dentes industriales y la violencia intrafamiliar.
te y la técnica quirúrgica que utilice.

992
CAPÍTULO XIII: TRAUMA MAXILOFACIAL

Durante los asaltos, la mandíbula y el hueso Fracturas naso-órbito-etmoidales: se ex-


malar son las estructuras óseas más suscep- tienden desde los huesos nasales hasta el
tibles de fracturas, a diferencia del tercio medio hueso etmoides. Pueden causar alteraciones
fascial, que es la región que recibe el impacto o lesiones del aparato lacrimal y del conducto
principal del trauma en los accidentes de nasofrontal, con ruptura de dura. Es común la
tránsito. lesión del canto medio.

Se han definido los conceptos de fuerza de Fracturas cigomaticomaxilares: resultan de


alto y de bajo impacto. Se consideran fuerzas un trauma directo sobre la región malar, con
mayores, o de alto impacto, las de 50 veces desarticulación de las suturas cigomatico-
la fuerza de la gravedad, y menores, o de bajo frontal, cigomaticotemporal y cigomaticoxilar.
impacto, las de menos de 50 veces la fuerza Usualmente comprometen el agujero infra-
de la gravedad. En las estructuras faciales orbitario y el piso de la órbita.
existen diferencias regionales en lo referente
a la cantidad de fuerza necesaria para crear Fracturas maxilares: se clasifican como fac-
una injuria. El hueso frontal, la sínfisis y el án- turas Le-Fort I, II y III.
gulo mandibular, así como los rebordes supra-
orbitarios, requieren una fuerza de alto impac- Fractura Le-Fort I: es una fractura horizontal
to para fracturarse. del maxilar superior, que separa el proceso
alveolar y el paladar del resto de la maxila. Se
extiende a través del tercio inferior del septum,
CAUSAS e incluyen la pared lateral del seno maxilar
con extensión a la apófisis pterigoides y al
Fracturas de hueso frontal: se producen por hueso palatino.
un traumatismo severo de la región frontal. El
seno frontal puede estar comprometido, y si Fractura Le-Fort II: es una fractura piramidal
la pared posterior del seno resulta fracturada, que se inicia en el hueso nasal y se extiende
puede existir lesión de la duramadre y tam- al hueso lacrimal. Se dirige posteriormente
bién del conducto nasofrontal. hacia abajo, a través de la sutura cigomatico-
maxilar, y se continúa posterior y lateralmen-
Fracturas del piso orbitario: se producen te al maxilar, por debajo del malar hasta la
cuando se genera un aumento de la presión apófisis pterigoides.
intraorbitaria. El aumento de la presión intra-
orbitaria produce fractura de la pared ósea Fractura Le-Fort III: es la separación de los
más débil, generalmente el piso orbitario o la huesos faciales de la base del cráneo.
pared medial. La fractura del piso de la órbita
puede producir herniación del contenido de la Fracturas mandibulares: pueden presentar-
órbita hacia el seno maxilar y la consecuente se en cualquier lugar de la mandíbula, siendo
alteración visual y funcional del ojo. los cóndilos la parte más débil y la sínfisis la
más resistente.
Fracturas nasales: se producen como resul-
tado de las fuerzas transmitidas por un trau- Fracturas alveolares: se pueden producir
ma directo, y son discutidas en otra Guía de como consecuencia del impacto directo de una
esta serie. fuerza de baja energía sobre el proceso
alveolar, o como continuación de una línea de

993
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

fractura de la mandíbula o del maxilar supe- a la palpación, con presencia de escalón


rior. infraorbitario y hemorragia subconjuntival. El
atrapamiento del nervio infraorbitario genera
Fracturas panfaciales: se producen como parestesia del labio superior y de la región na-
consecuencia del impacto directo de una fuer- sal lateral. En algunos casos puede atrapar-
za de alta energía y comprometen los tres ter- se el músculo recto inferior y generarse di-
cios faciales simultáneamente. plopia.

Fracturas maxilares: en las fracturas Le-Fort


PRESENTACIÓN CLÍNICA I se aprecia edema facial, movilidad del maxi-
lar superior y cambios en la oclusión.
Fracturas frontales: se encuentra crepitación
del reborde supraorbitario, enfisema subcutá- En fracturas Le-Fort II se encuentra edema
neo y parestesia de los nervios supratroclea- facial, telecanto traumático, hemorragia sub-
res y supraorbitario. conjuntival, movilidad del maxilar en la sutura
nasofrontal, epistaxis, cambios oclusales y
Fracturas del piso de la órbita: se encuentra algunas veces rinorrea.
edema y equímosis periorbitaria, parestesia
o anestesia infraorbitaria y lesión ocular. Cuan- En fracturas Le-Fort III hay edema masivo con
do se atrapan los músculos rectos medial e elongación y aplanamiento facial, mordida
inferior hay alteración de los movimientos ocu- abierta anterior y movilidad de todo el tercio
lares. medio cuando se manipulan los dientes del
maxilar superior; frecuentemente se encuen-
Fracturas nasales: se presenta con dolor y tran epistaxis y rinorrea.
edema nasal, desplazamientos que pueden
generar laterorrinia o hundimientos, crepita- Fracturas alveolares: los hallazgos clínicos
ción y epistaxis. incluyen laceración y sangrado gingival. Alte-
raciones dentales como movilidad, avulsión y/
Fracturas naso-órbito-etmoidales: el signo o pérdida dental, adicionalmente, puede pre-
patognomónico es el telecanto traumático, sentarse movilidad del proceso alveolar.
cuya característica principal es el aplanamien-
to y ensanchamiento del puente nasal. Otros Fracturas mandibulares: los hallazgos clíni-
hallazgos frecuentes son epífora, rinorrea y cos incluyen maloclusión, trismus, dificultad
epistaxis. para morder, movilidad de los segmentos
óseos y crepitación. Intraoralmente hay ede-
Fracturas del arco zigomático: se presenta ma, equímosis y sangrado gingival. Cuando
dolor y un defecto de la región del arco, obser- el nervio dentario inferior está lesionado hay
vable y palpable. Durante los movimientos parestesia o anestesia de la región sinfisiaria.
mandibulares hay limitación de la apertura
bucal. Fracturas panfaciales: las fracturas panfa-
ciales pueden comprometer la vida del pacien-
Fracturas del complejo zigomático-maxilar: te. Sus hallazgos clínicos dependen de la com-
los hallazgos clínicos en estas fracturas inclu- binación de las múltiples fracturas que son
yen una eminencia malar deprimida y dolorosa posibles en esta muy grave lesión.

994
CAPÍTULO XIII: TRAUMA MAXILOFACIAL

EXAMEN FÍSICO con gran facilidad. Su examen se realiza pal-


pándola en forma bimanual para detectar frac-
Se inspecciona la cara. Cuando se encuentran turas.
heridas abiertas, se deben limpiar y retirar los
cuerpos extraños; intraoralmente se debe des- El pabellón auricular debe inspeccionarse, y
pejar la cavidad oral de dientes fracturados o el conducto auditivo examinarse para determi-
cuerpos extraños que puedan comprometer nar la presencia de laceraciones, comprobar
la vía aérea. la integridad de la membrana timpánica, de-
tectar hemotímpano, perforaciones, salida de
Es conveniente examinar la cara por tercios, líquido cefalorraquídeo y equímosis de la re-
para no pasar por alto ninguna alteración. gión mastoidea (signo de Battle), lo cual su-
giere fractura de la base del cráneo.
El tercio superior lo conforman el hueso fron-
tal y el seno frontal. La valoración de una frac- Los estudios imagenológicos mayormente em-
tura que compromete el seno frontal debe pleados para el estudio del tercio medio son
complementarse con una tomografía axial la TAC con cortes axiales y coronales y, alter-
computadorizada (TAC). Los estudios más nativamente, la radiografía de Waters, la ra-
útiles son la TAC con cortes axiales y corona- diografía posteroanterior de cara, la radiogra-
les y, alternativamente, radiografía anteropos- fía submental vertex y radiografías oclusales.
terior de cara y radiografía de Waters.
El tercio inferior contiene los maxilares y el
El tercio medio contiene sistemas altamente sistema estomatognático: los maxilares y la
especializados que controlan funciones espe- articulación temporomandibular deben ser
cíficas como el olfato, la audición y la visión. examinadlos extraoralmente.
El síndrome de la fisura orbitaria superior debe
tenerse en cuenta: sus características son Intraoralmente se examinan la lengua y la
oftalmoplejía, ptosis palpebral superior, prop- mucosa oral y se buscan equímosis, edema y
tosis y pupila midriática fija. Sí a estas carac- laceraciones intraorales.
terísticas se agregan amaurosis o disminución
del apex orbitario, se debe interconsultar inme- La mandíbula debe ser palpada bimanualmente
diatamente con los especialistas en cirugía para determinar si hay movilidad de los segmen-
maxilofacial y en oftalmología para un mane- tos o crepitación. Si la mandíbula está fracturada,
jo interdisciplinario conjunto. el paciente no podrá morder un baja lenguas.

Cuando las paredes orbitarias están compro- Se colocan los dedos del examinador sobre los
metidas, se producen atrapamientos oculares; dientes anteriores superiores, con la otra mano
se debe realizar la prueba de aducción forza- sobre el puente nasal; se mueve el maxilar en
da, para lo cual se necesita anestesiar la escle- sentido anteroposterior y lateral: si solamente
ra; posteriormente se pinza, tratando de des- se mueven los dientes, ello indica que se trata
plazar el globo ocular en sentido superior. Si de una fractura Le-Fort I. Si se mueve el puente
el ojo permanece fijo, ello significa que está nasal, esto indica una fractura Le-Fort II o III.
atrapado y el tratamiento es quirúrgico.
Cada diente debe manipularse individualmen-
La nariz es una estructura anatómica que por te para determinar movimiento, dolor, sangra-
su posición y proyección resulta traumatizada do gingival o crepitación.

995
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El estado neurológico debe evaluarse, con es- • Neurológico: se registra la escala de Glas-
pecial atención a los pares craneanos, hacien- gow y se consigna cualquier cambio en el
do énfasis en los oculomotores, facial y estado mental; se practica un breve exa-
trigémino. men neurológico.

Los estudios imagenológicos para el examen


del tercio inferior incluyen la radiografía pano- TERAPIA MÉDICA
rámica y, como alternativas, radiografía pos-
teroanterior, radiografías laterales oblicuas iz- El manejo médico incluye administración de
quierda y derecha de la mandíbula, radiogra- oxígeno y de líquidos cristaloides isotónicos.
fía de Towne y radiografías oclusales. La TAC Si hay sangrado excesivo, es conveniente
de cóndilos está indicada cuando hay sospe- transfundir glóbulos rojos empaquetados (con-
cha clínica de fractura, con estudios radio- centrado de glóbulos rojos). Se aplica terapia
gráficos negativos. antitetánica, según el protocolo que aparece
en otra Guía de esta serie.

ESTUDIOS DE LABORATORIO El uso de antibióticos es variado: en las lacera-


ciones faciales se utiliza dicloxacilina; en he-
Los siguientes estudios están indicados: ridas de cavidad oral clindamicina; cuando hay
• Cuadro hemático. En casos de sangrado comunicación con el seno maxilar amoxicilina.
excesivo, evaluar hemoglobina y hemato-
crito cada 4 horas. El dolor requiere medicación por vía oral si
• Hemoclasificación. las heridas son menores, o parenteral en los
• Pruebas de coagulación. casos en que el paciente no puede utilizar la
• Beta gonadotropina coriónica. vía oral. La terapia antiinflamatoria es similar:
se utilizan medicamentos como ibuprofeno,
naproxeno, ketorolaco o rofecoxib. Para el
ATENCIÓN EN SALA control del dolor se utiliza codeína, oxicodona,
DE EMERGENCIA meperidina y morfina.

• Vía aérea: se debe administrar oxígeno y


mantener una vía aérea permeable. Se LECTURAS RECOMENDADAS
debe colocar un cuello ortopédico en for-
ma permanente. La cavidad oral debe es- 1. Andreasen J, Andreasen F. Essentials of traumatic
tar limpia de cuerpos extraños y se debe injuries to the teeth. Copenhagen. Munksgaard,
succionar la sangre. 1990.
• Ventilación: se debe realizar intubación oro 2. Baker S, Dalrymple D, Betts N. Concepts and
o nasotraqueal o cricotiroidotomia cuando techniques of rigid fixation. Oral and maxillofacial
existe un gran edema orofaringeo, y tam- trauma. En: Oral and Maxillofacial Trauma. Edita-
do por R Fonseca. Second edition. WB Saunders.
bién si hay trauma de los tercios superior y
Philadelphia,1997.
medio. 3. Burget G, Menick F. Aesthetic reconstruction of
• Circulación: no deben removerse cuerpos de nose. CV Mosby. St Louis, 1995.
extraños que puedan causar daño, se con- 4. Ingle J, Bakland L. Endodontics. Fourth edition,
trola la hemorragia y se instala un acceso Williams and Wilkins, Baltimore,1994.
venoso bilateral.

996
CAPÍTULO XIII: TRAUMA MAXILOFACIAL

5. Juniper R, Awty M. The immobilization period for 8. Tobin G. Closure of contaminated wounds. Surg
fractures of the mandibular body. Oral Surg 1973; Clin North Am 1984; 64:639-645.
36:157-165. 9. Werther J, Richardson G, Mc Ilwain M. Nasal tube
6. Lewin W. Cerebrospinal fluid rhinorrea in nonmissile switch: converting from a nasal to an oral
head injuries. Clin Neurosurg 1966; 12:237-242. endotracheal tube without extubation. J Oral Maxil
7. Stanley R. Fractures of de frontal sinus. Clin Plast Surg 1994; 52:994-998.
Surg 1989; 16:115-122.

997
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIV

Blefaritis - conjuntivitis - orzuelo

Giovanni Castaño, MD
Profesor Asistente y Jefe Unidad de Oftalmología
Facultad de Medicina, Pontificia Universidad Javeriana
Hospital Universitario de San Ignacio

L a blefaritis, la conjuntivitis y el orzuelo son


motivo frecuente de consulta a los servi-
cios de urgencia. Tanto el médico general co-
En otros casos, la blefaritis aparece de manera
aguda y el desarrollo de la enfermedad de-
pende de la etiología. Después de un trauma
mo el médico de urgencias deben estar fami- palpebral, incluso leve, puede aparecer sobre-
liarizados con el manejo de estas entidades infección bacteriana impetiginosa. Las infec-
de incidencia común en la población general. ciones herpéticas son también frecuentes, las
más comunes son las producidas por virus del
Herpes simplex tipo I y por Varicella-Zoster.
BLEFARITIS Otras enfermedades dermatológicas como la
psoriasis o la rosácea se pueden asociar con
EPIDEMIOLOGÍA blefaritis; lesiones tumorales benignas o ma-
lignas del párpado pueden simular blefaritis
La inflamación palpebral es un problema que crónica severa, por lo cual se debe plantear
afecta a individuos de cualquier edad, género la posibilidad de neoplasia en pacientes mayo-
o raza. La forma más común es la blefaritis res con cuadro serio de inflamación palpebral
marginal crónica, en la cual el compromiso in- que no cede al tratamiento y que progresa.
flamatorio está limitado al borde palpebral y a
la inserción de las pestañas. Además de in-
ducir síntomas molestos, la blefaritis puede CUADRO CLÍNICO
predisponer o asociarse con lesiones conjun-
tivales y de la córnea. La definición del cuadro clínico varía según la
etiología. Si no se dispone de magnificación su-
ficiente como la que da una lámpara de hendi-
FISIOPATOLOGÍA dura, el médico deberá estar atento a cambios
muchas veces sutiles y que sólo se notan con
Aunque la blefaritis marginal crónica está aso- una inspección detallada. El uso de una lupa
ciada con la presencia de Estafilococo epider- común o del oftalmoscopio directo utilizando las
midis o de Estafilococo aureus, la enferme- lentes de poder positivo es práctica y conve-
dad parece ser una manifestación de hiper- niente. Sea cual fuere la causa que ha originado
sensibilidad ante la presencia de la bacteria la consulta, los pacientes siempre deben tener
más que una entidad infecciosa. una evaluación confiable de su agudeza visual
lejana, corregida con anteojos cuando el pacien-
te los requiera para ver de lejos.

998
CAPÍTULO XIV: BLEFARITIS - CONJUNTIVITIS - ORZUELO

La blefaritis marginal crónica rara vez es mo- intermedios en individuos con infección por
tivo de consulta urgente; sin embargo, re- Herpes simplex I. En este último caso, el área
presenta el cuadro clínico típico evocado de lesión está localizada en el párpado; en el
usualmente por el término “blefaritis”. Los pa- Herpes zoster las lesiones se extienden si-
cientes se quejan de prurito palpebral, desca- guiendo el dermatoma correspondiente y en
mación y enrojecimiento del borde libre del la varicela, el paciente tiene compromiso cu-
párpado. Casi siempre hay historia clara que táneo generalizado. Es posible la disemina-
evidencia la cronicidad de la afección. Al exa- ción de la infección a la conjuntiva y la córnea
men se encuentra descamación, fina o gruesa, e incluso, en el caso del Herpes zoster, al in-
de la piel que rodea las pestañas y eritema terior del ojo, razón por la cual debe evaluar-
del borde palpebral. No es raro descubrir áreas se el estado de la transparencia corneana y
de ausencia o de inversión de las pestañas si hay “ojo rojo”, determinar sistemáticamente
como consecuencia de la inflamación crónica. sus características.
Por detrás de las pestañas, en donde se en-
cuentran los orificios de salida de las glándu-
las de Meibomio, se puede observar que los AYUDAS PARA EL DIAGNÓSTICO
mismos están dilatados y es evidente su se-
creción en forma de puntos blanco-amarillen- En los casos de blefaritis marginal crónica, no
tos en el borde del párpado. suelen ser necesarias ayudas diagnósticas ini-
ciales. En pacientes con blefaritis bacteriana
de origen traumático, la realización de un ex-
BLEFARITIS BACTERIANA POSTRAUMÁTICA tendido y coloración de Gram puede ser útil
para orientar el tratamiento, aunque no siem-
Casi siempre es secundaria a un trauma que pre es necesario. Cuando la infección es típi-
el paciente recuerda. A veces puede apare- ca del Herpes simplex tipo I ó apareció de ma-
cer después de picaduras de insectos. Los nera simultánea con un cuadro de varicela en
pacientes tienen secreción amarillenta con la infancia, no se requieren exámenes adicio-
formación de costras en la piel de los párpa- nales. En pacientes con Herpes zoster de la
dos pero, a diferencia de la blefaritis marginal rama oftálmica del trigémino los exámenes pa-
crónica, la lesión está localizada en el área raclínicos se realizan con el fin de descubrir
del trauma o la picadura. si el paciente está inmunosuprimido; el cuadro
hemático y la glicemia son esenciales en esta
evaluación.
BLEFARITIS HERPÉTICA

La secuencia de presentación es típicamente TRATAMIENTO


herpética. Aparece inicialmente un área de
dolor o prurito en el párpado, y rápidamente La blefaritis marginal crónica se trata en prin-
sigue eritema; luego se forman lesiones vesi- cipio con una serie de recomendaciones co-
culares que uno o dos días después se rom- nocidas como “de higiene palpebral”. La apli-
pen y generan costras, lo que hace posible la cación local de compresas tibias una vez al
sobreinfección bacteriana. Los síntomas son día con una frecuencia de entre dos o tres
menos severos en el caso de niños con vari- veces por semana, dependiendo de la severi-
cela, muy intensos en pacientes con Herpes dad del cuadro, es claramente útil. También
zoster de la rama oftálmica del trigémino e se necesita realizar limpieza del párpado, con

999
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

énfasis en la cercanía de las pestañas, utili- PRONÓSTICO


zando champú para niños y una gasa, con
técnica similar a la utilizada para retirar el La blefaritis marginal es crónica y la probabi-
maquillaje. lidad de curación escasa; sin embargo, el tra-
tamiento alivia significativamente los síntomas
La blefaritis bacteriana postraumática, si es y previene las complicaciones. En la blefaritis
leve, debe tratarse únicamente con antibióti- postraumática el pronóstico es excelente
co en ungüento. La eritromicina, la bacitracina cuando el tratamiento se inicia a tiempo. La
o la tetraciclina tópica deben aplicarse tres o infección herpética palpebral suele hacerse
cuatro veces al día durante una semana, en recurrente y la afección corneal o intraocular
promedio. Si la infección es mayor, debe aña- puede generar serias secuelas anatómicas y
dirse tratamiento antibacteriano por vía oral, visuales.
como la dicloxacilina, durante el mismo
tiempo.
CONJUNTIVITIS
La blefaritis por Herpes simplex debe tratarse
con aciclovir por vía oral, 400 mg 5 veces al EPIDEMIOLOGÍA
día durante 7 días, sobre todo si es el primer
episodio. La aplicación local de aciclovir se El término conjuntivitis se refiere a la inflama-
discute cada vez más, pero es posible que el ción de la conjuntiva, independientemente de
ungüento actúe como paliativo al humedecer su causa. La conjuntivitis puede afectar en al-
las lesiones y además evite la sobreinfección gunos casos a poblaciones específicas, por
bacteriana. No es necesaria la administración ejemplo la oftalmia neonatorum que es exclu-
de antibióticos tópicos o sistémicos si no se siva de recién nacidos; o puede tener presen-
evidencia infección bacteriana sobreagregada. cia indiscriminada como la conjuntivitis alér-
En los pacientes con Herpes zoster oftálmi- gica. La conjuntivitis es uno de los motivos de
co, el tratamiento incluye iniciar sin demora consulta más frecuentes en la consulta oftal-
aciclovir 800 mg 5 veces al día y la remisión mológica general y en la atención de urgen-
urgente al oftalmólogo. cias.

CRITERIOS DE REFERENCIA FISIOPATOLOGÍA

La blefaritis marginal crónica debe ser remiti- La inflamación conjuntival tiene diversos orí-
da al oftalmólogo cuando no se controla con genes. Los vasos conjuntivales se dilatan y
las medidas iniciales o cuando su intensidad se presenta el aspecto de congestión conjun-
hace sospechar compromiso corneal o un tu- tival conocido como “ojo rojo”. Igualmente apa-
mor palpebral. La blefaritis bacteriana postrau- rece secreción que, según la etiología, puede
mática puede convertirse en celulitis periorbi- ser de tipo mucoso o purulento. La cercanía
taria, la cual requiere valoración oftalmológica. anatómica y funcional de la conjuntiva y la cór-
Las infecciones herpéticas deberán ser remi- nea hace que esta última esté siempre en ries-
tidas cuando se observe “ojo rojo” o se sos- go de sufrir complicaciones o secuelas como
peche compromiso del globo ocular. En los consecuencia de la conjuntivitis. Las causas
casos de infección por Herpes zoster, la valo- de conjuntivitis incluyen alergia, enfermeda-
ración oftalmológica es ineludible. des autoinmunes, infecciones (virales, bacte-

1000
CAPÍTULO XIV: BLEFARITIS - CONJUNTIVITIS - ORZUELO

rianas, por clamidia), irritación mecánica, quí- no bacterianas están Adenovirus, con infec-
mica, farmacológica y neoplásica. ción autolimitada, el Herpes con posibilidad
de producir infección corneal y la chlamydia,
aunque esta última puede ser de tipo agudo
CUADRO CLÍNICO (primera causa de oftalmia neonatorum).

Resulta conveniente clasificar las conjuntivi- La conjuntivitis crónica puede ser de tipo infec-
tis de acuerdo con el tiempo de evolución cioso y es frecuente verla asociada a blefaritis,
transcurrido entre la aparición de los síntomas ojo seco y malposiciones del párpado como
iniciales y la máxima intensidad de los mis- entropión o ectropión. Con frecuencia es cró-
mos. Cuando este periodo es menor de 24 nica la conjuntivitis alérgica, que puede ser
horas se considera la conjuntivitis como hiper- de tipo estacional, vernal, atópico o papilar gi-
aguda; si es de uno a siete días, como aguda; gante. En esta entidad la reacción alérgica tie-
si está entre ocho y treinta días, subaguda y ne como órgano blanco a la conjuntiva y se
si supera las cuatro semanas se clasifica como producen ardor ocular, prurito intenso, secre-
crónica. ción mucosa y ojo rojo. El examen demuestra
la congestión conjuntival y la presencia de
La conjuntivitis hiperaguda es producida con papilas en el tarso o la conjuntiva bulbar, for-
frecuencia por gonococo, ya sea en el recién maciones que pueden verse con alta magni-
nacido (segunda causa de oftalmia neonato- ficación.
rum) o en el adulto por contacto con secrecio-
nes genitales contaminadas. Otros gérmenes En la mayoría de los pacientes con conjunti-
pueden ser estafilococo, estreptococo y ade- vitis se puede lograr muy buena aproximación
novirus; sin embargo estos casos tienden a etiológica con la historia clínica y el examen,
ser más de tipo agudo. En la conjuntivitis hiper- especialmente si se cuenta con la magnifica-
aguda bacteriana el cuadro es tan severo que ción óptica suficiente. Si no dispone de una
la secreción purulenta intensa comienza a lámpara de hendidura, el médico debe estar
aparecer unas horas después del contagio. atento a cambios muchas veces sutiles y que
El paciente tiene sensación de cuerpo extra- requieren inspección detallada; el uso de una
ño, prurito y “ojo rojo” severos. Cuando la en- lupa común o del oftalmoscopio directo con
fermedad es viral la sintomatología es igual- las lentes de poder positivo es una práctica
mente intensa pero no hay secreción purulen- conveniente. Igualmente, sea cual fuere la
ta, en cambio aparece secreción mucosa causa que ha originado la consulta, los pa-
transparente o blanquecina abundante. cientes siempre deben tener evaluación con-
fiable de su agudeza visual lejana, corregida
La conjuntivitis aguda tiene síntomas simila- con anteojos cuando el paciente los requiera
res pero de menor intensidad; muchas veces para ver de lejos.
en adultos es autolimitada pero puede ser muy
agresiva en niños. El estafilococo es el agen-
te causante más común, aunque otras bacte- AYUDAS PARA EL DIAGNÓSTICO
rias como estreptococos, neumococo, H. in-
fluenzae, pseudomonas y varias más, pueden Debido a que el diagnóstico es con frecuen-
ser las responsables. En el cuadro subagudo cia clínico, muchos pacientes no requieren de
es frecuente encontrar a la Moraxella lacunata pruebas adicionales. Sin embargo, en algu-
como agente etiológico. Dentro de las causas nos casos es necesario solicitar exámenes

1001
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

complementarios. Todos los pacientes con go, debido a la imposibilidad de vigilar las com-
diagnóstico de oftalmia neonatorum o conjun- plicaciones potenciales de esta terapia por
tivitis neonatal, deben ser investigados con parte del médico no oftalmólogo, es impruden-
coloración de Gram y cultivo, especificando te su formulación por fuera de la consulta es-
que se sospecha gonococo. También es im- pecializada en oftalmología aunque la presen-
portante el cultivo en los casos de conjuntivi- tación que se pretenda utilizar esté mezclada
tis bacteriana recurrente o que no ha cedido con antibióticos.
con el tratamiento. Cuando se sospecha in-
fección por Chlamydia se requieren pruebas La conjuntivitis por Herpes simplex debe ser tra-
de inmunodiagnóstico específicas para este tada desde su inicio con aciclovir 400 mg cinco
agente, ya que la coloración de Gram y el cul- veces al día, hasta que el cuadro se controle,
tivo para gérmenes comunes no permiten su con el fin de evitar las complicaciones corneales
identificación. En pacientes con cuadro corres- de la enfermedad. La aplicación tópica de
pondiente a infección viral casi nunca se rea- trifluridina o vidarabina está indicada; sin em-
lizan estudios paraclínicos. bargo, debido a su difícil disponibilidad, es facti-
ble iniciar aciclovir igualmente tópico. La aplica-
ción de esteroides tópicos o sistémicos está fran-
TRATAMIENTO camente contraindicada en estos pacientes.

La conjuntivitis alérgica requiere tratamiento La conjuntivitis bacteriana no gonocócica, ya


a largo plazo bajo la dirección del oftalmólogo sea hiperaguda, aguda o subaguda, requiere
y no es motivo de consulta frecuente en ur- tratamiento con antibióticos tópicos. Aunque
gencias. en adultos la enfermedad puede autolimitarse,
el tratamiento previene complicaciones y acor-
En pacientes con infección por Adenovirus, ya ta la duración de los síntomas. Dentro de las
sea como conjuntivitis hiperaguda o aguda, opciones terapéuticas más efectivas y segu-
el tratamiento es en principio paliativo porque ras están la tobramicina, la sulfacetamida y el
la enfermedad es autolimitada; es adecuado ácido fusídico. Medicamentos como cloranfe-
formular lágrimas artificiales o suero fisiológi- nicol, ciprofloxacina, lomefloxacina y ofloxaci-
co en gotas para aplicación cada dos o tres na, deben ser considerados como opciones
horas. Conviene recordar que los colirios uti- de segunda línea, y siempre teniendo en cuen-
lizados deben ser nuevos, ya que los frascos ta la posibilidad de crear cepas resistentes que
previamente abiertos suelen contaminarse con puedan representar grave problema en casos
el tiempo. Igualmente es necesario informar de infecciones severas futuras, locales o sisté-
al paciente si va a utilizar suero fisiológico, micas. La aplicación de los colirios debe co-
que éste debe ser puro y sin colorantes o sa- menzar con una gota cada hora o cada dos
bores. La aplicación de compresas tibias suele horas por las primeras 24 ó 48 horas, según
ser muy reconfortante. Con estas medidas los la severidad del cuadro. Posteriormente la fre-
pacientes comienzan a experimentar mejoría cuencia de administración puede disminuir a
en los primeros días y generalmente una se- cada cuatro o seis horas de acuerdo con la
mana después la enfermedad ya no está pre- respuesta clínica; es indispensable completar
sente. No es necesaria la aplicación de anti- una semana de tratamiento continuo para ase-
biótico tópico si no hay secreción purulenta. gurar respuesta óptima y reducir la posibilidad
Se han utilizado esteroides tópicos en bajas de generar cepas resistentes. Los pacientes
dosis para la infección adenoviral; sin embar- pueden tener mejoría más rápida y apropiada

1002
CAPÍTULO XIV: BLEFARITIS - CONJUNTIVITIS - ORZUELO

cuando, en los casos con secreción purulenta Cuando la infección es por clamidia, el cua-
abundante, se realiza limpieza de la misma dro clínico es menos dramático y suele mani-
varias veces al día ayudándose con irrigación festarse de forma aguda o subaguda. El re-
de solución salina normal. cién nacido tiene el riesgo de desarrollar in-
fección respiratoria alta y baja hasta en 50%
La oftalmía neonatorum, conjuntivitis del re- de los casos, lo que hace necesaria la terapia
cién nacido o conjuntivitis neonatal, necesita sistémica con eritromicina 50 mg/kg al día por
especial atención porque puede inducir secue- vía oral divididos en cuatro dosis, durante 10
las visuales severas o complicaciones sistémi- a 14 días. El tratamiento sistémico suele con-
cas serias. Las causas más comunes de con- trolar la enfermedad sin necesidad de trata-
juntivitis en un recién nacido son tóxica, gono- miento tópico. La madre debe ser examinada
cócica y por clamidia. La tóxica se produce y tratada al igual que su compañero sexual.
como reacción a los medicamentos utilizados
en la prevención de la misma enfermedad y
usualmente es autolimitada; el cuadro clínico CRITERIOS DE REFERENCIA
no es severo y no hay secreción purulenta;
sin embargo es importante dejar este diagnós- Cualquier paciente con conjuntivitis y pérdida
tico como de exclusión y antes de adoptarlo, visual, episodios recurrentes, dolor ocular o
descartar las otras causas. falta de respuesta a la terapia debe ser remi-
tido al oftalmólogo. Los pacientes con conjun-
La infección por gonococo se presenta de ma- tivitis por adenovirus en quienes persisten sín-
nera hiperaguda, se adquiere porque el canal tomas después de dos a tres semanas, igual-
del parto esté contaminado y puede generar mente deberán ser valorados por oftalmolo-
opacidades corneales densas y ceguera, per- gía. Todos los pacientes con conjuntivitis her-
foración ocular y sepsis. Por estas razones el pética requieren examen oftalmológico espe-
tratamiento debe ser muy intenso. El pacien- cializado por la posibilidad de lesión corneal.
te debe hospitalizarse y aplicar una dosis úni- Igual conducta debe tomarse en pacientes con
ca intramuscular o intravenosa de ceftriaxone, cuadros purulentos muy severos, como en el
entre 25 y 50 mg/kg, sin exceder 125 mg. La caso de la conjuntivitis gonocócica o de le-
limpieza de la secreción debe hacerse cada sión corneal evidente.
hora si es necesario. La aplicación de antibió-
tico tópico no es de mucha utilidad pero pue-
de iniciarse tratamiento simultáneo con tobra- PRONÓSTICO
micina o eritromicina cada una o dos horas.
El paciente debe ser observado al principio La mayoría de las conjuntivitis tiene buen pro-
varias veces al día y luego diariamente. Debi- nóstico y suelen ser resueltas por el médico
do a que es posible que el paciente tenga una no oftalmólogo de manera exitosa. En los ca-
infección concomitante con clamidia, es ne- sos en que aparecen lesiones corneales o ci-
cesario adicionar el tratamiento contra esta catrización palpebral, pueden desencadenar-
última aunque no se haya evidenciado su pre- se problemas visuales serios e incluso irre-
sencia. La madre debe ser examinada y tra- versibles por endoftalmitis secundaria o por
tada, al igual que su compañero sexual. opacidades corneales densas que obstaculi-
zan el eje visual.

1003
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PREVENCIÓN nera múltiple, intensa y repetida, debe consi-


derarse seriamente la posibilidad de inmuno-
La conjuntivitis por Adenovirus puede ser epi- deficiencia, con frecuencia de tipo congénito.
démica y su transmisión puede prevenirse con
el lavado apropiado de las manos de los pa-
cientes y sus acudientes y también de los FISIOPATOLOGÍA
médicos. Los niños afectados con la enferme-
dad pueden no cooperar activamente con el La obstrucción, inflamación aguda y posterior
lavado de manos y no evitan el contacto di- sobreinfección de las glándulas palpebrales
recto con otros niños, por lo que es prudente origina el orzuelo. La afección de las glándu-
autorizar su ausencia del colegio o escuela las de Zeis y Moll produce el orzuelo externo
durante dos o tres días. El lavado de las ma- que cursa con el cuadro clínico típico. Cuan-
nos también es recomendable para los demás do el problema afecta las glándulas de
tipos de conjuntivitis pero generalmente no es Meibomio se origina el orzuelo interno, un
necesaria la incapacidad escolar o laboral. poco más difícil de reconocer. La sobreinfec-
ción es usualmente debida a Staphylococcus
En el caso de la oftalmia neonatorum la pre- aureus.
vención es altamente efectiva, requiere cui-
dado y tratamiento prenatal apropiado a la
madre y la aplicación generalizada, en la sala CUADRO CLÍNICO
de partos a todos los recién nacidos, de un
agente antibacteriano en dosis única en am- El orzuelo se caracteriza por la aparición de
bos ojos. Una dosis de ungüento de eritromici- una lesión rápidamente progresiva en el pár-
na al 0,5% o de tetraciclina en ungüento al pado, casi siempre cerca del borde. Hay una
1% es suficiente. Otros agentes como las masa eritematosa y muy dolorosa. Si el or-
sulfas o aminoglicósidos como la gentamicina zuelo es externo puede con frecuencia obser-
o la tobramicina resultan muy poco o nada varse el punto de drenaje de la glándula obs-
efectivos. La posibilidad de prevenir la enfer- truido. El orzuelo interno puede no verse cla-
medad con la aplicación local de ioduro de ramente y el paciente puede quejarse solo de
povidona al 2,5% en dosis única es muy alta, dolor. Sin embargo al evertir los párpados se
pero el uso de este medicamento no ha sido evidencia la lesión.
aprobado por las agencias internacionales de
control de medicamentos.
AYUDAS DIAGNÓSTICAS

ORZUELO No se requieren ayudas diagnósticas espe-


ciales.
EPIDEMIOLOGÍA

El orzuelo es muy común en la población ge- TRATAMIENTO


neral pero particularmente en la pediátrica. Los
pacientes con pobre higiene de las manos o El orzuelo es frecuentemente autolimitado y
aquellos con blefaritis suelen presentar la en- la aplicación de compresas tibias varias ve-
fermedad con mayor frecuencia. En casos en ces al día en los estados tempranos de la en-
los cuales los orzuelos se presentan de ma- fermedad suele abortar la supuración y resol-

1004
CAPÍTULO XIV: BLEFARITIS - CONJUNTIVITIS - ORZUELO

ver la lesión. Sin embargo, si el orzuelo no PRONÓSTICO


resuelve o ha comenzado a drenar, es nece-
sario añadir antibióticos tópicos idealmente en El pronóstico de la enfermedad es excelente.
ungüento como la tobramicina, la tetraciclina
o la ciprofloxacina. Los mismos antibióticos
en colirio o la sulfacetamida también pueden LECTURAS RECOMENDADAS
ser de utilidad. La administración debe ser va-
rias veces al día, de acuerdo con la severidad 1. Fraunfelder F, Roy FH, Meyer SM. Current Ocular
del cuadro, continuándose por una semana Therapy. 5th ed. WB Saunders. Philadelphia, 2000.
después del control clínico. 2. Isenberg SJ, Apt I, Valenton M, et al. A controlled
trial of povidone-iodine to treat infectious
conjunctivitis in children. Am J Ophthalmol 2002;
Casi nunca se requiere terapia antimicrobiana 134:681-688.
sistémica; sin embargo, en casos refractarios 3. Jackson WB, Low DE, Dattani D, et al. Treatment
al tratamiento tópico o con una presentación of acute bacterial conjunctivitis: 1% fusidic acid
severa, se recomienda la administración de viscous drops vs 0.3% tobramycin drops. Can J
dicloxacilina o eritromicina por vía oral. Ophthalmol 2002; 37:228-237.
4. Rhee DJ. The Wills Eye Manual. 3 rd. ed. Lippincott
Williams & Wilkins. Philadeplhia, 1999.
5. Shields SR. Managing Eye Disease in Primary
CRITERIOS DE REFERENCIA
Care. Part 2. How to recognize and treat common
eye problems. Postgrad Med 2000; 108:83-86.
Los orzuelos pueden generar celulitis periorbi- 6. Vaughan DG, Asbury T, Riordan-Eva P. Oftalmo-
taria o absceso y en esos casos es necesaria logía General. 12a ed. Manual Moderno. México
la valoración oftalmológica. DF, 2000.

1005
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XV

Ojo rojo

Giovanni Castaño, MD
Profesor Asistente y Jefe de la Unidad de Oftalmología
Facultad de Medicina, Pontificia Universidad Javeriana
y Hospital Universitario de San Ignacio.

INTRODUCCIÓN

E l ojo rojo, aislado o acompañado de otros


síntomas o signos, es uno de los motivos
de consulta más frecuentes en oftalmología.
que rodean la córnea, los llamados vasos pro-
fundos o periqueráticos. Cuando se examina
el ojo con linterna se pueden observar estos
Aunque las causas son numerosas, es nece- dos sistemas vasculares, encontrando que la
sario que el médico no oftalmólogo tenga la conjuntiva tiene vasos que se movilizan con
capacidad de reconocer las manifestaciones ella y que alrededor de la córnea hay una red
clínicas que lo orienten hacia un diagnóstico vascular muy fina que no se mueve al mani-
acertado para la solución inicial del problema pular la conjuntiva, por lo cual puede pasar
o para iniciar un manejo racional mientras el desapercibida.
paciente es remitido al especialista en oftal-
mología. La acción de un agente o mecanismo agresor
genera en el ojo una respuesta vasodilatadora
Las causas de ojo rojo varían en severidad, y como parte de la reacción inflamatoria. Esta
aunque muchas son transitorias y pueden ser vasodilatación es conocida como ojo rojo o
controladas sin secuelas, otras pueden ser congestión conjuntival. En principio, cualquier
causa de ceguera o de problemas sistémicos alteración de la conjuntiva que no afecte al
serios, razones que obligan a prestar atención globo ocular se acompaña de dilatación de los
ordenada y sistemática al paciente. vasos superficiales y, por lo tanto, la conges-
tión conjuntival aparece evidente, excepto en
un anillo de aproximadamente dos milímetros
FISIOPATOLOGÍA de espesor que rodea la córnea, zona donde
se hallan los vasos correspondientes a la cir-
El segmento anterior del ojo y la superficie culación profunda y que no reaccionan ante
ocular están ricamente irrigados por dos ple- la agresión conjuntival.
xos vasculares prácticamente independientes.
La conjuntiva, membrana mucosa que recubre Las enfermedades del globo ocular se presen-
la porción anterior de la esclerótica hasta el tan con frecuencia con una congestión conjun-
limbo corneo-escleral, contiene vasos cono- tival mixta. Existe dilatación de los vasos con-
cidos como superficiales. El globo ocular y su juntivales superficiales y de los profundos,
contenido anterior están irrigados por vasos siendo entonces evidente una congestión

1006
CAPÍTULO XV: OJO ROJO

conjuntival que llega hasta la córnea sin res- Hemorragia subconjuntival: representa uno
petar el área anular mencionada. Es impor- de los motivos de consulta más frecuentes en
tante recalcar que en afecciones del segmen- urgencias, y generalmente se acompaña de
to anterior del globo ocular, aunque la con- gran ansiedad por parte del paciente. Excep-
gestión es mixta, es definitivamente de pre- to en los casos de trauma, en los cuales los
dominio profundo o periquerático. síntomas dependen de la magnitud, del tipo
de agresión y de las lesiones asociadas, el
Otra de las formas de presentación del ojo rojo paciente es prácticamente asintomático, la
ocurre cuando uno de los vasos conjuntivales visión está conservada y no hay secreción
se rompe, dando paso a la sangre hacia el conjuntival. En las hemorragias subconjunti-
espacio subconjuntival. Este fenómeno per- vales postraumáticas es necesario definir el
mite que la sangre se acumule debajo de la mecanismo del trauma, la presencia de otras
conjuntiva formando una capa homogénea alteraciones oculares y la agudeza visual.
que luego cambia de color hacia amarillo, para Cuando no hay antecedente de trauma y tam-
finalmente desaparecer en un periodo aproxi- poco se logra demostrar factores de riesgo
mado de una semana. La hemorragia subcon- para la hemorragia subconjuntival, se puede
juntival puede entonces ocurrir en respuesta formular la hipótesis de un trauma menor ya
a trauma, alteraciones de la coagulación, hi- olvidado o inducido durante el sueño.
pertensión arterial no controlada, otras enfer-
medades hematológicas o puede ser espon- Conjuntivitis: la conjuntivitis bacteriana sue-
tánea sin causa aparente. Es importante reco- le afectar únicamente a la conjuntiva sin invo-
nocer que el tipo de ojo rojo asociado con la lucrar a la córnea, o sea que la congestión es
hemorragia subconjuntival es difuso y homo- de tipo superficial. La presencia de conges-
géneo, y que no se evidencia congestión vas- tión profunda en pacientes con conjuntivitis
cular, ni es posible diferenciar los vasos con- bacteriana, es decir, con secreción purulenta,
juntivales, a diferencia de las congestiones implica, con alto grado de certeza, que hay
superficial o periquerática. infección corneal asociada. La conjuntivitis
viral con frecuencia es en realidad una quera-
toconjuntivis, por lo cual la congestión será
CUADRO CLÍNICO mixta pero con mayor intensidad en los vasos
superficiales. (Ver la guía Conjuntivitis en
En ausencia de magnificación suficiente como esta misma serie).
la que proporciona una lámpara de hendidu-
ra, el médico debe estar atento a cambios su- Uveítis: la capa vascular del ojo se conoce
tiles que requieren inspección detallada. El uso como úvea. Cuando la úvea posterior (coroi-
de una lupa común, o bien del oftalmoscopio des) se inflama, el cuadro se conoce como
en el poder positivo, es una práctica conve- coroiditis o uveítis posterior, pero si la inflama-
niente. Independiente de la causa que ha ori- ción se presenta en la úvea anterior (iris‘–
ginado la consulta, los pacientes siempre de- cuerpo ciliar), aparece el cuadro denominado
ben tener una evaluación confiable de su agu- uveítis anterior. Aunque puede haber inflama-
deza visual corregida con anteojos. La deter- ción aislada del iris (iritis) o del cuerpo ciliar
minación de una asociación de cambios vi- (ciclitis), la uveítis anterior usualmente invo-
suales con la presencia de ojo rojo es un dato lucra la inflamación de ambas estructuras, por
significativamente orientador para llegar al lo cual se le reconoce como iridociclitis. Las
diagnóstico. causas de la uveítis anterior son múltiples e

1007
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

incluyen trauma, enfermedades autoinmunes, su cuantificación no es posible, puede perci-


infecciones, neoplasias, etc. birse cualitativamente al palpar el ojo a través
de los párpados cerrados.
La inflamación intraocular se manifiesta como
dolor ocular, ojo rojo con congestión de pre- Aunque la presión intraocular elevada del glau-
dominio profundo o periquerático, alteración coma crónico de ángulo abierto suele no indu-
visual y tendencia a pupila miótica o irregular. cir daño en el nervio óptico durante años, pue-
La enfermedad puede producir complicacio- den bastar sólo unas horas de hipertensión
nes graves como hipertensión intraocular, ca- ocular en el glaucoma agudo de ángulo estre-
tarata o incluso desprendimiento de retina. El cho para lesionar de manera total el nervio
diagnóstico se hace por la presencia de célu- óptico produciendo ceguera irreversible. Este
las libres flotando en el humor acuoso, junto es el motivo por el cual se debe establecer un
con otros hallazgos típicos, y se manifiesta diagnóstico certero que permita iniciar trata-
cuando el especialista examina el ojo con la miento de inmediato. El ataque agudo de un
lámpara de hendidura. glaucoma de ángulo estrecho suele presen-
tarse de manera unilateral, aunque el otro ojo
Glaucoma agudo: el tipo de glaucoma más posteriormente puede desarrollar un cuadro
frecuente es el crónico de ángulo abierto, el similar.
cual se caracteriza por la presencia de pre-
sión intraocular elevada, alteración del nervio Cuerpo extraño corneal: los pacientes con
óptico y cambios en el campo visual. No tiene ojo rojo pueden presentar cuerpos extraños,
cura y generalmente es asintomático; no pro- de cualquier índole, ubicados en la córnea.
duce ojo rojo ni dolor ocular y por lo tanto no Los más frecuentes son de tipo metálico, que
es motivo de consulta en urgencias. afectan a personal de la construcción o de ta-
lleres. Hay fuerte sensación de cuerpo extra-
Otro tipo de glaucoma, el agudo de ángulo ño, con lagrimeo, fotofobia y congestión peri-
estrecho, aunque mucho más raro, sí es de querática. La visión suele ser normal. El cuer-
común presentación en los servicios de urgen- po extraño se evidencia en el examen con
cias. En esta enfermedad, el ángulo de la cá- magnificación con lupa o con el oftalmoscopio,
mara anterior, por donde drena el humor acuo- pero en algunos casos se encuentra en la
so, es estrecho y se ha ocluido por un iris di- conjuntiva tarsal superior, por lo cual siempre
latado en respuesta a medicamentos (anticoli- se debe evertir el párpado para examinarlo
nérgicos, antidepresivos, etc.) o a la oscuri- por su aspecto posterior.
dad. El cierre angular evita que el humor acuo-
so drene efectivamente, acumulándose en el
ojo e incrementando la presión intraocular. El AYUDAS DIAGNÓSTICAS
paciente se queja de dolor intenso, visión bo-
rrosa y ojo rojo. El examen muestra disminu- Hemorragia subconjuntival: si no hay ante-
ción de la agudeza visual, córnea no transpa- cedente de trauma el paciente debe ser inte-
rente, midriasis media que no reacciona y cá- rrogado sobre antecedentes de hipertensión,
mara anterior estrecha. La estrechez puede coagulación defectuosa o leucemia. Cuando
evidenciarse al iluminar el ojo de lado con una haya sospecha de problemas de la coagula-
linterna, lo cual permite ver que el iris está ción o cuando la hemorragia subconjuntival
muy cerca de la córnea. Las cifras de presión es recurrente, está plenamente indicada la
intraocular son con frecuencia extremas y si evaluación hematológica especializada.

1008
CAPÍTULO XV: OJO ROJO

Conjuntivitis: esta entidad se describe en la cuerpo extraño para que éste no quede en el
guía Conjuntivitis de esta misma serie. fondo del saco conjuntival, ya que desde allí
puede adherirse de nuevo a la córnea. Si el
Uveítis anterior: se requieren múltiples exá- lavado no es exitoso, se puede ensayar la lim-
menes paraclínicos, los cuales deben ser or- pieza con un aplicador de algodón estéril hu-
denados por el oftalmólogo. medecido con anestesia.

Glaucoma agudo de ángulo estrecho: no Si el cuerpo extraño persiste y es superficial,


hay exámenes especiales que puedan ser rea- se hace necesario intentar su extracción con
lizados en urgencias para apoyar el diagnós- una aguja de insulina, pero este procedimien-
tico; sin embargo, si dentro del tratamiento en to debe idealmente ser realizado por un oftal-
el servicio de urgencias se piensa utilizar mani- mólogo. Si se detecta una perforación acci-
tol intravenoso o acetazolamida, los pacien- dental del ojo con la aguja, lo cual es evidente
tes de edad avanzada deben ser examinados por la salida de humor acuoso y por la pérdi-
con respecto a enfermedades crónicas y dege- da de la cámara anterior, no debe aplicarse
nerativas asociadas y a función cardio-respi- ningún medicamento tópico, sino que el ojo
ratoria y renal. debe ser ocluido y el paciente remitido de in-
mediato al oftalmólogo.

TRATAMIENTO Una vez se ha extraído un cuerpo extraño, se


aplica ungüento antibiótico (sin esteroide) y
Hemorragia subconjuntival: a pesar de su se ocluye el ojo por 24 horas. Luego de des-
aspecto llamativo, y en ocasiones dramático, cubrir el ojo, se inicia antibiótico tópico como
la hemorragia subconjuntival desaparece en trobramicina, tres o cuatro veces al día, por
un periodo aproximado de una semana, por cinco días.
lo cual el tratamiento debe ser paliativo con la
simple aplicación de lágrimas artificiales y, so-
bre todo, la explicación del fenómeno al pa- CRITERIOS DE REFERENCIA
ciente.
Hemorragia subconjuntival: la hemorragia
Uveítis anterior: el manejo de la uveítis debe subconjuntival con antecedente de trauma,
ser dirigido por el oftalmólogo. acompañada de mala visión o con sospecha
de otras lesiones oculares debe ser remitida
Glaucoma agudo de ángulo estrecho: ver al oftalmólogo; también debe ser remitido el
guía de Glaucoma en esta misma serie. paciente con una hemorragia no plana sino
elevada, la cual implica la existencia de un
Cuerpo extraño corneal: es necesaria la dis- hematoma que podría estar ocultando una
ponibilidad permanente de anestesia tópica perforación ocular subyacente.
oftálmica en los servicios de urgencias. Con
una o dos gotas se logra un efecto anestésico Conjuntivitis: cualquier conjuntivitis bacteria-
en segundos y dura lo suficiente para permitir na en la que se evidencie congestión peri-
la extracción. Es posible que muchos cuerpos querática debe ser remitida al oftalmólogo,
extraños puedan ser lavados simplemente con puesto que el cuadro sugiere extensión de la
solución salina sin necesidad de mayor mani- infección a la córnea o incluso a estructuras
pulación. Es importante recuperar siempre el intraoculares.

1009
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Uveítis anterior: todo paciente con sospecha rios como glaucoma o con ceguera por cata-
diagnóstica de uveítis debe ser remitido de rata o desprendimiento de retina.
inmediato al oftalmólogo.
Glaucoma agudo de ángulo estrecho: el
Glaucoma agudo de ángulo estrecho: todo pronóstico es excelente cuando se realiza el
paciente debe ser remitido inmediatamente al control apropiado en urgencias. La iridotomía
oftalmólogo una vez se haya controlado el ata- prácticamente elimina el riesgo de ataques
que agudo en urgencias. La remisión debe posteriores y la necesidad de tratamiento adi-
ocurrir en las primeras 24 horas. cional. Si un ataque no se controla a tiempo o
si el paciente tiene otras alteraciones oculares
Cuerpo extraño corneal: la remisión está in- asociadas, el glaucoma agudo de ángulo es-
dicada cuando se sospecha perforación ocu- trecho puede inducir ceguera permanente e
lar por el cuerpo extraño o por el médico al intratable.
intentar la extracción. Por el alto riesgo de
perforación ocular, los cuerpos extraños pro- Cuerpo extraño corneal: el pronóstico es
fundos deben remitirse sin manipulación. excelente. En casos de cuerpos extraños pro-
fundos centrales, la lesión cicatricial residual
puede reducir la visión de manera permanen-
PRONÓSTICO te. Cuerpos extraños de origen vegetal o bio-
lógico conllevan alto riesgo de infección.
Hemorragia subconjuntival: el pronóstico es
excelente si no existen factores de riesgo o
los mismos están controlados. La hemorragia LECTURAS RECOMENDADAS
subconjuntival no afecta la visión ni pone en
1. Bertolini J, Pelucio M. The Red Eye. Emerg Med
peligro el globo ocular. Clin North Am 1995; 13:561-579.
2. Fraunfelder F, Roy FH, Meyer SM. Current Ocular
Conjuntivitis: ver guía de Conjuntivitis en Therapy. 5th ed. WB Saunders. Philadelphia, 2000.
esta misma serie. 3. Rhee DJ. The Wills Eye Manual. 3rd ed. Lippincott
Williams & Wilkins. Philadeplhia, 1999.
Uveítis anterior: el pronóstico depende de la 1. Shields SR. Managing eye disease in primary care.
severidad del cuadro, de la causa y de la pre- Part 2. How to recognize and treat common eye
problems. Postgrad Med 2000; 108:83-86.
sencia de alteraciones oculares asociadas. El
2. Vaughan DG, Asbury T, Riordan-Eva P. Oftalmo-
pronóstico es mejor si el tratamiento se inicia logía General. 12a edición. Manual Moderno. Méxi-
oportunamente. Muchos pacientes logran co DF, 2000.
mantener visión perfecta sin secuelas, pero 3. West S. The red eye. N Engl J Med 2000;
algunos terminan con problemas oculares se- 343:1577-1585.

1010
CAPÍTULO XVI: GLAUCOMA AGUDO DE ÁNGULO CERRADO

CAPÍTULO XVI

Glaucoma agudo de ángulo cerrado

Martha Montenegro, MD
Sección de Oftalmología
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

E sta es una guía de manejo del glaucoma


agudo de ángulo cerrado dirigida a médi-
cos no oftalmólogos que atienden urgencias.
visión si no se instaura tratamiento oportuno.
La historia natural de esta enfermedad en el
paciente no tratado es el desarrollo de ceguera
bilateral dolorosa. Por consiguiente, un epi-
sodio de glaucoma de ángulo cerrado, cons-
DEFINICIÓN tituye una urgencia oftalmológica.

El glaucoma agudo por cierre angular se inicia


por aposición excesiva entre el iris y el cristali- EPIDEMIOLOGÍA
no que impide el flujo de humor acuoso de la
cámara posterior a la anterior con el desarrollo Esta entidad ocurre en adultos con factores
de bloqueo pupilar relativo. El gradiente de pre- de riesgo de bloqueo pupilar. Se han reporta-
sión resultante entre las cámaras anterior y pos- do diferencias considerables en la prevalen-
terior causa abombamiento anterior del iris peri- cia entre grupos raciales. El glaucoma de án-
férico, de modo que el iris ocluye la porción gulo cerrado es raro en la raza blanca (0,1%-
filtrante de la malla trabecular (cierre angular 0,2%), su prevalencia se incrementa en la raza
aposicional) causando elevación de la presión oriental (1,7%), y representa menos del 10%
intraocular (PIO). El contacto prolongado del del total de glaucomas en los Estados Uni-
iris periférico con la malla trabecular puede ge- dos. En Colombia, una revisión de casos de
nerar adherencias, sinequias anteriores pe- la Sección de Glaucoma del Hospital San Vi-
riféricas y daño funcional de la malla trabecular. cente de Paúl en Medellín reportó 79,5% de
ángulo estrecho-cerrado (Gómez 1981). Un
La PIO se ejerce sobre todas las paredes del estudio más reciente realizado en la Funda-
globo ocular, incluyendo el nervio óptico (dis- ción Santa Fe de Bogotá en 1.631 pacientes
co óptico) y los vasos que lo nutren. El aumen- latino-americanos mayores de 40 años, mos-
to de la PIO a >21 mmHg, y en el glaucoma tró 4% de casos de cierre angular primario y
se encuentran presiones de 40-80 mmHg, in- entidades relacionadas (Montenegro 2002).
terfiere con la perfusión del nervio óptico cau-
sando daño irreversible a esta vía nerviosa. Los siguientes han sido implicados como fac-
tores de riesgo en el desarrollo de glaucoma
Un ataque agudo de glaucoma de ángulo ce- primario de ángulo cerrado:
rrado conlleva un alto riesgo de pérdida de • Hipermetropía.

1011
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Historia familiar de ángulo cerrado. ojo contra lateral tiene respuestas


• Envejecimiento. normales.
• Sexo femenino. • Evaluación del reflejo rosado retinal para
• Origen del lejano Oriente o esquimal. documentar la transparencia de los medios
ópticos; debido al severo edema corneal
causado por el aumento de la PIO, el refle-
CARACTERÍSTICAS CLÍNICAS jo rosado retinal está ausente o muy dis-
DE LA ENFERMEDAD minuido, lo que con frecuencia impide rea-
lizar una oftalmoscopia directa.
El aumento repentino de la PIO causa sínto- • Si los medios se encuentran razonable-
mas como dolor ocular severo con enrojeci- mente transparentes se debe intentar oftal-
miento ocular, visión de halos de colores alre- moscopia directa para documentar el es-
dedor de las luces, disminución de la agude- tado del nervio óptico.
za visual, malestar general, cefalea frontal, • Medición de la PIO: la palpación digital del
náuseas o vómitos por reflejo vagal. Estos sín- ojo comprometido y la comparación de su
tomas de carácter sistémico pueden confun- firmeza con el ojo sano pueden ayudar a
dir el diagnóstico. En el examen ocular se evaluar la PIO, cuando no se dispone de
aprecia inyección conjuntival, edema corneal, un tonómetro ocular.
cámara anterior panda, y pupila en dilatación
media no reactiva. El globo ocular se siente La realización de algunos exámenes diagnós-
firme a la palpación. ticos como tonometría (medición de la PIO),
biomicroscopía (examen con lámpara de hen-
didura), la gonioscopia (examen del ángulo
DIAGNÓSTICO camerular), la interpretación de los resultados
y el manejo quirúrgico de la enfermedad re-
La evaluación inicial del paciente con glauco- quieren un alto grado de entrenamiento mé-
ma agudo de ángulo cerrado incluye una histo- dico, juicio clínico y experiencia por parte de
ria sistémica y ocular, con búsqueda de sínto- un oftalmólogo.
mas que sugieran ataques intermitentes de
cierre angular (visión borrosa, halos de colores
alrededor de las luces, dolor ocular o ciliar, hipe- DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
remia ocular). Se debe investigar historia fami-
liar de glaucoma agudo de ángulo cerrado. Los procesos inflamatorios oculares que pro-
duzcan dolor e inyección ocular deben ser con-
Los componentes del examen físico que son siderados en el diagnóstico diferencial.
relevantes para el diagnóstico y manejo del
cierre angular incluyen los siguientes: En la conjuntivitis aguda, hay dolor leve acom-
• Examen de la agudeza visual que se en- pañado de inyección conjuntival y con frecuen-
cuentra muy disminuída y no corrige con cia secreción mucoide o purulenta. La agude-
agujero estenopéico za visual está preservada, las pupilas son
• Verificación del tamaño pupilar y de los re- normales en tamaño y los reflejos pupilares
flejos pupilares: la pupila del ojo enfermo están preservados. El reflejo rosado retinal
se encuentra típicamente en midriasis me- presente permite evaluar el estado del nervio
dia y sus respuestas a luz y acomodación óptico.
son mínimas o ausentes, en tanto que el

1012
CAPÍTULO XVI: GLAUCOMA AGUDO DE ÁNGULO CERRADO

La iritis aguda causa considerable fotofobia, debe instilar con frecuencia, inicialmente
dolor e inyección conjuntival sin secreción. La cada 5 minutos x 4 dosis, y posteriormente
agudeza visual puede encontrarse disminuida cada 6 horas.
y la pupila del ojo comprometido está miótica, • Beta bloqueador: maleato de timolol al
con mínima respuesta pupilar a la luz. El reflejo 0,5% cada 12 horas.
rosado retinal puede estar disminuido por la • Inhibidores de la anhidrasa carbónica vía
presencia de células inflamatorias en el humor oral, ya que en Colombia no se encuentra
acuoso, pero es posible evaluar el fondo del la presentación parenteral: acetazolamida
ojo. 500 mg iniciales seguidos por 250 mg
c/6h.

MANEJO Y TRATAMIENTO Otros medicamentos menos usados en el


manejo del glaucoma agudo de ángulo cerra-
Los criterios de desenlace para el paciente do son:
incluyen: • Inhibidores de la anhidrasa carbónica tópi-
• Revertir el cierre angular. cos: la dorzolamida, que es poco hipoten-
• Aliviar el bloqueo pupilar. sora.
• Lograr una PIO estable y adecuada. • Análogos prostaglandínicos: son potentes
en la reducción de la PIO por medio del
El tratamiento para el glaucoma agudo de án- aumento del flujo uveo-escleral, pero por
gulo cerrado es quirúrgico. El procedimiento ser mediadores de inflamación pueden in-
de elección es una iridotomía con láser. (Ver crementar la inyección ocular.
algoritmo). • Alfa-2 agonistas adrenérgicos: poco útiles
porque causan dilatación pupilar.
En la sala de urgencias se utiliza la terapia • Algunos cirujanos utilizan los corticoides
médica inicialmente para bajar la PIO, permitir tópicos para disminuir la inflamación o co-
que la córnea se aclare y se rompa el bloqueo mo preparación para la iridotomía.
pupilar, con el fin de realizar una iridotomía
más fácil y segura. La mayoría de los procedimientos diagnósti-
cos y terapéuticos se puede realizar en una
La terapia médica incluye algunos o todos los consulta externa o en unidad ambulatoria. La
siguientes, basados en el estado general y hospitalización breve está justificada para el
respuesta del paciente. tratamiento médico intensivo de un ataque
• Agentes hiperosmóticos sistémicos: la ad- agudo y el seguimiento de los pacientes con
ministración de estos medicamentos en pa- alto riesgo de complicaciones sistémicas y
cientes diabéticos y ancianos con ICC o post-operatorias
IRC debe ser cautelosa.
a. Glicerina 50% vía oral, en dosis de 1g/ El oftalmólogo que realice una iridotomía con
kg. de peso, si el paciente tolera la vía láser o iridectomia incisional debe asegurar-
oral. se que el paciente reciba cuidado postopera-
b. Manitol endovenoso en dosis de 1-2 g/ torio adecuado. Los exámenes de seguimiento
kg de peso en pacientes con intoleran- se usan para controlar los aspectos residuales
cia gástrica del cierre angular. Aproximadamente la mitad
• Miótico: pilocarpina al 2% es el único co- de los ojos contralaterales no tratados desa-
mercialmente disponible en Colombia y se rrollan cierre angular en un plazo de 5 años.

1013
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La disponibilidad de la iridotomía con láser y INTERCONSULTA, REMISIÓN


su seguridad relativa frente a la iridectomía
quirúrgica ha incrementado la relación riesgo/ Cuando el diagnóstico o el tratamiento están
beneficio y ha permitido que se considere la en duda o si el caso es refractario al tratamien-
intervención como preventiva en situaciones to, se debe consultar a un especialista experto
menos estrictas. en glaucoma. Los pacientes ciegos o con pér-
dida importante de la visión deben ser remiti-
dos a un servicio de rehabilitación.

GLAUCOMA AGUDO DE ANGULO CERRADO

MANEJO MEDICO INICIAL

ESTADO GENERAL
BUENO MALO

BUENA TOLERANCIA GASTRICA VOMITO

GLICERINA MANITOL

ACETAZOLAMIDA
REFLEJO PUPILAR

MAS DEBIL AUSENTE MAS

PILOCARPINA PILOCARPINA

TIMOLOL

REDUCCION DE LA PIO

GONIOSCOPIA

SIN SINEQUIAS SINEQUIADO

IRIDOTOMIA CONSIDERAR CIRUGIA FILTRANTE

1014
CAPÍTULO XVI: GLAUCOMA AGUDO DE ÁNGULO CERRADO

LECTURAS RECOMENDADAS interim quality of life findings after initial medical


or surgical treatment of glaucoma. Ophthalmology
1. American Academy of Ophthalmology. Advisory 2001; 108:1954-1965.
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1015
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVII

Urticaria
Juan Guillermo Chalela, MD
Jefe, Sección de Dermatología
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a urticaria es, junto con las reacciones a


drogas, la causa más común de consulta
de urgencia relacionada con las enfermeda-
tales como: tipo de brote, intensidad del pruri-
to, tiempo que dura una lesión, si cambia la
calidad de vida del enfermo, si altera el sueño,
des de la piel. circunstancias en que aparece, tales como las
relacionadas con drogas, comidas o medio
Se caracteriza por la aparición de lesiones pá- ambiente.
pulo-edematosas, eritematosas, pruriginosas
y fugaces, que pueden localizarse en cualquier El examen físico es muy importante; hay que
parte de la superficie cutánea o en las muco- valorar el tipo de lesiones, si en vez de prurito
sas. Suele clasificarse en forma regular en urti- el paciente tiene dolor, la forma de las lesio-
caria aguda, cuando lleva menos de 6 sema- nes, puesto que en las urticarias figuradas los
nas de aparición y en urticaria crónica, cuando medicamentos son los mas comúnmente im-
lleva más de 6 semanas. Dentro de esta cla- plicados en la etiología y buscar dermografis-
sificación están todas las formas de urticaria, mo rojo; este dermografismo es de muy impor-
pero no el angioedema o edema angioneu- tante ayuda, pues muchas veces en el mo-
rótico. mento de examinar el paciente no exhibe nin-
guna otra lesión, a pesar de una historia muy
Se dividen en urticaria ordinaria o clásica, urti- clara de urticaria.
caria física, secundaria a algún estímulo (como
son la adrenérgica, acuagénica, colinérgica, Usualmente en el servicio de urgencias no es
al frío, por presión, dermografismo rojo, indu- necesario practicar exámenes de laboratorio
cida por el ejercicio, por calor, solar o vibrato- especiales, pero cuando es mandatario hacer-
ria), la urticaria de contacto (por contacto con lo, se realiza hemograma con velocidad de se-
productos biológicos o químicos), la urticaria dimentación globular (VSG), uroanálisis, exa-
vasculítica y el angioedema. men de heces y un frotis de garganta con cul-
tivo, este último para hacer diagnóstico dife-
rencial con erisipela. En el hemograma es
DIAGNÓSTICO importante tener en cuenta la presencia de
eosinofilia o una VSG elevada; la primera hace
Es clínico, especialmente cuando se trata de pensar en parasitismo intestinal y la segunda,
un cuadro de urticaria aguda, pero es impor- en caso de estar elevada, lleva a pensar en
tante realizar un interrogatorio ordenado y su- una urticaria crónica o vasculítica. La biopsia
cinto para aclarar el proceso. En este aspecto, de piel no se practica en urgencias y usual-
hay que tener en cuenta varias situaciones mente cualquier médico debe reconocer una

1016
CAPÍTULO XVII: URTICARIA

urticaria con el cuadro clínico; sin embargo, En urgencias se hace el interrogatorio clínico
en casos de urticaria crónica o de urticaria vas- y una observación minuciosa de las lesiones
culítica, este examen es mandatario y debe cutáneas, las cuales deben ser reconocidas
practicarlo un dermatólogo. en forma rápida por cualquier médico con una
capacitación universitaria adecuada. Son muy
pocas las enfermedades con las cuales se
ETIOLOGÍA debe establecer diagnóstico diferencial, ya
qua la tríada clásica de pápulas eritematosas,
La urticaria aguda, tiene diversas etiologías y edematosas y pruriginosas, fugaces o con
condiciones en su aparición: medicamentos, cambio de localización, es prácticamente úni-
comidas, inhalantes, picaduras de insectos, el ca de esta enfermedad. Hay que determinar
sol. En la urticaria crónica, se debe pensar en si el paciente tiene urticaria o angioedema,
las mismas causas de la aguda, más las causas puesto que en la primera la posibilidad de ede-
de infecciones ocultas, neoplasias, enfermeda- ma de glotis o de asfixia por obstrucción de
des autoinmunes, implantes: siliconas, dispo- las vías respiratorias es mínimo o casi inexis-
sitivos intrauterinos (DIU) y prótesis, entre otras. tente, lo cual hace innecesario tomar medidas
“heroicas”, muchas veces más peligrosas que
la misma enfermedad de base; pero en el an-
PATOGÉNESIS gioedema hay un 15% de probabilidad de tal
situación, lo que amerita estar muy conciente
Todos los tipos de urticaria, al final de cuentas, de este riesgo.
tienen como resultado la desgranulación de
los mastocitos, pero con un mediador diferente Se debe suspender, si es el caso, el uso de
en cada uno. Hay tipos de urticaria que inclu- medicamentos innecesarios, siendo los AINES
yen la mediación de la IgE. El complemento y los salicilatos los que se deben suspender
sérico (C5A) actúa también directamente en en primera instancia, los cuales aumentan en
la producción de histamina por parte de los un 30% el agravamiento de las urticarias, lo
mastocitos. Otras vías serían la activación del mismo que las bebidas alcohólicas, las gaseo-
AMP cíclico y las vías de la ciclooxigenasa, sas negras, los derivados lácteos y los embu-
facilitando la acción del ácido araquidónico tidos o alimentos con preservativos o aditivos.
sobre la desgranulación celular. En las urtica-
rias crónicas se sabe que el 20 a 25% son de
origen autoinmune. Últimamente se han de- TRATAMIENTO EN URGENCIAS
mostrado mediadores proinflamatorios como
citoquinas, proteasas y heparina, lo mismo 1. Corticoides sistémicos: No sirven como
que leucotrienos, factor activador de plaquetas terapia de la urticaria aguda, y solamente
y prostaglandina D2, como factores relacio- se usan para aliviar la situación inicial del
nados con la desgranulación mastocítica. paciente, preferiblemente en administra-
ción por vía intramuscular. La dexame-
tasona y/o la hidrocortisona son las más
TRATAMIENTO aconsejables por su acción rápida, corta y
de bajos efectos secundarios. Una ampo-
Es diferente el manejo de la urticaria en un lla IM de cualquiera de las dos, por una o
servicio de urgencias que en una consulta de dos dosis, es suficiente.
urticaria crónica.

1017
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Antihistamínicos: son las drogas de elec- 2. Epinefrina: sólo se usa en casos de angio-
ción en la terapia de la urticaria aguda. Hay edema agudo con edema de laringe y so-
antihistamínicos anti H1, anti H2 y antide- lamente la debe emplear un médico o una
presivos tricíclicos que actúan como anti- enfermera entrenada para este fin, pues es
histamínicos. muy peligrosa por sus numerosos efectos
secundarios graves y no es mucho más
Los anti H1 más recomendados son: efectiva, en la urticaria aguda, que los
• Hidroxicina, 10 a 50 mg, que es de acción esteroides sistémicos.
rápida por vía oral, por lo que es de elec-
ción en el servicio de urgencias; tiene efec- Como resumen, un buen esquema en urgen-
to sedante, potencial productor de glauco- cias sería:
ma o retención urinaria en ancianos.
• Cetiricina, de la misma familia de la hidro- Dexametasona 4-8 mg IM + hidroxicina 20 mg
xicina, por lo cual se deben dar al tiempo: VO + amitriptilina 25 mg o doxepina 50 mg
10 mg, una vez al día; es ligeramente se- vía oral. Si no hay mejoría a las 8 horas, se
dante y de acción un poco más lenta que puede aplicar una nueva ampolla de dexame-
la anterior. tasona, continuando con la dosis de antihista-
• Loratadina, 10 mg diarios. mínicos por vía oral.
• Desloratadina, 5 mg, de la misma familia
de la anterior, de acción muy poco sedan-
te y algo más lenta, por lo cual se aconseja PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
más una vez el paciente se retire de ur-
gencias, con la ventaja de tener acción No hay manera de evitar la aparición de un
antiinflamatoria muy importante. cuadro de urticaria y solamente el paciente
• Fexofenadina 180 a 240 mg al día, de ac- que conoce las circunstancias de su enferme-
ción más lenta, poco sedante, con buen dad es el único que la puede prevenir. En todo
efecto antiinflamatorio. caso, todos los servicios médicos deben rea-
lizar campañas explicativas, especialmente en
Sustancias como la clemastina no se aconse- situaciones ambientales especiales. Cuando
ja por su lenta acción, su efecto sedante mar- una urticaria aparece una vez, no necesaria-
cado y su poca eficacia en las urticarias mente tiene que seguir apareciendo cuando
crónicas. el paciente se expone a las mismas situacio-
nes que la produjeron.
Los anti H2 más aconsejables, pero de mayor
uso en urticaria crónica son: Si el médico de urgencias no posee la capaci-
• Ranitidina, 300 mg, una o dos veces al día. dad de reconocer las lesiones de la piel, y en
• Famotidina, 20 a 40 mg al día. especial la urticaria, es deber perentorio inter-
consultar al dermatólogo en el mismo servi-
1. Los antidepresivos tricíclicos, como la cio de urgencias.
amitriptilina en dosis de 25-50 mg al día
o la doxepina, 25-75mg al día, son muy
efectivos pero producen mucho efecto se- LECTURAS RECOMENDADAS
dante y tienen numerosos efectos secun-
darios graves en pacientes ancianos. 1. Atuesta J. Urticaria y angioedema agudos. Urgen-
cias en dermatología. Editado por Chalela, Pérez,

1018
CAPÍTULO XVIII: SHOCK ANAFILÁCTICO

Atuesta, Rodríguez. Essex Farmacéutica, Bogo- 3. Jorizzo J. Urticaria. Curr Prob Dermatol 2000; 12:9-10.
tá, 1998. 4. Grattan C, Sabroe R, Graves M. Chronic urtica-
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1019
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVIII

Shock anafiláctico

Julián Gómez Alzate, MD


Jefe, Servicio de Urgencias
Clínica del Country
Bogotá

A nafilaxia es el término acuñado para agru-


par a un conjunto de signos y síntomas
que coinciden con lesiones producidas por la
para los más frecuentes alergenos, se puede
extrapolar que las reacciones anafilácticas
producidas por picadura de insectos (general-
liberación sistémica súbita de mediadores quí- mente abejas o avispas) llegan a generar has-
micos a partir de mastocitos y basófilos espe- ta el 50% de las muertes por esta causa en
cialmente. Parte de la dificultad para realizar los Estados Unidos de Norteamérica; los anti-
el diagnóstico preciso de las diferentes fases bióticos betalactámicos pudieron llegar a pro-
de la anafilaxia, es la imposibilidad de estable- ducir cerca de 400 a 800 muertes por anafi-
cer, clínicamente, el límite entre cada una de laxia por año y cerca de 1 por 2.000.000 en
ellas. Aunque se puede llegar a un diagnósti- los pacientes sometidos a inmunoterapia aler-
co sindromático en forma rápida y con cierto génica.
rango de precisión confiable, no hay manera
de determinar el paso a la siguiente fase en
sentido ascendente o descendente en las es- FACTORES PREDISPONENTES
calas de severidad. Esta característica es la Y CAUSAS PRECIPITANTES
que exige que el personal de urgencias se en-
cuentre adecuadamente capacitado en los La incidencia y prevalencia de los eventos
procesos de reconocimiento y tratamiento de anafilácticos dependen de factores tan diver-
esta entidad y de su más grave manifestación, sos como la vía de contacto (son más frecuen-
el shock anafiláctico. tes y severos en la administración por vía pa-
renteral que por la oral o la tópica), el nivel de
exposición y la posibilidad o conciencia de ex-
EPIDEMIOLOGÍA posición previa más o menos prolongada. In-
fluye la edad y se tiene mayor número de
Por tratarse de una entidad que no requiere eventos severos, e inclusive fatales, en adultos
notificación obligatoria, existe un claro subre- que fueron expuestos a medios de contraste
gistro mundial, pero se estima que es un pro- intravenoso, dextranos, anestésicos genera-
blema que puede generar eventos mortales les, así como a picaduras de insectos de la
hasta en 154 por 1.000.000 de personas, con familia himenóptera. La distribución por sexo
riesgo relativo de presentación de 1% a 3 %, presenta una característica diferente: es más
y en algunos estudios con una incidencia de frecuente la presentación de anafilaxis ante
anafilaxia de 30 por 100.000; a pesar de no la picadura de insectos en hombres que en
poder establecer tasas de incidencia aisladas mujeres y ocurre lo contrario en la respuesta

1020
CAPÍTULO XVIII: SHOCK ANAFILÁCTICO

ante exposición a relajantes musculares, látex, características de la reacción inmunológica


medios de contraste radiológicos, aspirina y que termina en anafilaxia o en shock anafilác-
otros. tico.

FISIOPATOLOGÍA Y MEDIADORES PRESENTACIÓN CLÍNICA


QUÍMICOS DE ANAFILAXIS
La presentación clínica del shock anafiláctico
La liberación de mediadores químicos y de es usualmente dramática y la velocidad con
compuestos quimiotácticos producida durante la que se presentan los signos y síntomas de-
la desgranulación de los mastocitos, incluye pende del agente que genera la reacción. Esto
sustancias preformadas relacionadas directa- puede traducirse, por ejemplo, en la instaura-
mente con los gránulos y que son del tipo his- ción rápidamente progresiva de los síntomas
tamina, triptasa, quimasa, heparina o hepa- ante la exposición al veneno de un himenópte-
rinoides, factores liberadores de histamina y ro en un paciente susceptible (desde pocos
otros mediadores, prostaglandinas, leucotrie- minutos hasta la primera hora), en contraste
nos, factor activador plaquetario y factores pro con la aparición relativamente tardía (hasta
y anti-inflamatorios que permiten instaurar el más de 8 horas) de los eventos anafilácticos
cuadro anafiláctico en cualquiera de sus es- ante la exposición al ácido acetilsalicílico en
tados. un paciente medianamente susceptible.

La acción de la histamina sobre los receptores Las características clínicas más frecuentes
H1 exclusivamente, genera como reacción clí- son determinadas por el compromiso orgáni-
nica prurito, rinorrea, taquicardia y broncoes- co en forma cuantitativa y cualitativa, de tal
pasmo, mientras que la acción de la histamina manera que son más ominosas y dramáticas
sobre los receptores H1 y H2 en forma simul- en la medida en que comprometen más órga-
tánea, genera cefalea, enrojecimiento cutáneo nos y tienen mayor grado de severidad.
(flushing) e hipotensión. Los niveles séricos
de histamina durante el evento pueden estar La presentación usual del shock anafiláctico
relacionados con la duración y severidad del (dependiendo del tiempo de instauración) se
mismo, pero no necesariamente con la apari- caracteriza por un cambio abrupto del “esta-
ción o severidad de las reacciones urticariales. do vital” del paciente, con sensación de muerte
inminente, palidez, diaforesis profusa, taqui-
La presentación biológica de los demás me- cardia con pulso filiforme, edema progresivo
diadores, incluyendo activadores vaso-endote- incluyendo angioedema, urticaria y en casos
liales, activadores plaquetarios y de la coagu- avanzados o de progresión rápida, síntomas
lación, metabolitos producidos durante el pro- vaso-vagales como náusea, vómito, diarrea,
ceso de activación de las vías del ácido araqui- e inclusive síncope y convulsiones.
dónico (lipooxigenasa y COX), mediadores pro
inflamatorios y antiinflamatorios inespecíficos, Las características fisiopatológicas que con-
complementos C3 y C4, sistema quinina-cali- vierten al corazón en un órgano blanco de pri-
creína (activación de la cascada de la coagu- mera línea de ataque y, naturalmente, de pri-
lación por vía extrínseca) y otros, son los en- mera línea de atención, se deben a la acción
cargados de prolongar una respuesta de este directa y de gran intensidad de las sustancias
tipo hasta convertirla en una agresión de las vasoactivas sobre las arterias coronarias, las

1021
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

que llegan a niveles extremos de vasoconstric- equilibrio ácido-base producidas por cambios
ción que pueden generar hipoxia suficiente pa- respiratorios y metabólicos (incluidas las cau-
ra producir isquemia. Estos cambios son rever- sas tóxicas y los agentes generadores de la
sible en corazones estructuralmente sanos y anafilaxia per se).
en casos en que la situación no se ha prolon-
gado lo suficiente. En corazones previamen- El compromiso de órganos cuya reacción es
te enfermos puede aparecer disfunción seve- menos agresiva y veloz, como el hígado, el
ra del ventrículo izquierdo que requiere sopor- sistema retículoendotelial, el sistema nervioso
te cardiovascular. El compromiso cardiaco central (respuesta primaria), la médula ósea
puede manifestarse como arritmias de diver- y otros, es determinado, igual que los anterio-
sa letalidad según el mecanismo y el lugar de res, por el nivel de agresividad y velocidad de
origen. Este concepto permite llamar la aten- la respuesta inmunológica al alergeno. Pero
ción sobre pacientes que vienen medicados las manifestaciones clínicas reales suelen
crónicamente con betabloqueadores, pues en verse en el periodo posterior al episodio agu-
ellos la presentación de signos y síntomas do y no tienen repercusiones clínicas en el
puede variar casi hasta el polo opuesto, como período inicial.
bradicardia, hipotensión severa y broncoes-
pasmo, lo que implica el riesgo de diagnósti-
cos errados con inmediato fracaso terapéuti- ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
co e incremento de la mortalidad.
La velocidad de respuesta, evaluación de las
Un factor determinante de la respuesta tera- posibles complicaciones agudas, compromiso
péutica, e inclusive de la presentación clínica, de órgano blanco, inicio de maniobras de recu-
es el volumen intravascular efectivo, el cual peración o resucitación, y especialmente la de-
puede verse afectado hasta en un 50% por la tección de pacientes con historia de alergias
migración al espacio extravascular y producir conocidas, anafilaxis previa en cualquier grado
o perpetuar el estado de shock. Esto sucede, de severidad, exposición ambiental, contacto
aparentemente, según la respuesta al agente con insectos, reptiles, arácnidos, sustancias
externo, en calidad, severidad y velocidad, por tóxicas, medicamentos o historia familiar de
lo tanto deberá tenerse en cuenta como parte anafilaxia idiopática, son las medidas que real-
fundamental del enfoque inicial de urgencias. mente salvan vidas y son fundamentales para
un adecuado, oportuno y ágil tratamiento en
La vía aérea es posiblemente el segundo siste- el servicio de urgencias.
ma en cuanto a magnitud y severidad del com-
promiso; puede ser la primera causa de muer-
te por anafilaxia cuando la atención se centra TRATAMIENTO INICIAL
en otras funciones vitales y no se toman medi- DEL SHOCK ANAFILÁCTICO
das para el mantenimiento e integridad de la
misma en el contexto de la rápida evolución La presentación más o menos rápida de los
del problema respiratorio. Los hallazgos más síntomas relacionados con esta entidad per-
frecuentes son edema laríngeo, caracteriza- mite seguir, de manera organizada, los pasos
do por estridor, disfagia y cambios en la voz; necesarios para la atención en el servicio de
broncoespamo, que según la severidad pue- urgencias, sin descuidar el plan de tratamiento
de generar mayor o menor grado de disnea y, a mediano plazo, que deberá establecerse en
por supuesto, hipoxemia con alteraciones del forma paralela. Por razones fisiopatológicas

1022
CAPÍTULO XVIII: SHOCK ANAFILÁCTICO

obvias, la prioridad es mantener la estabilidad Antihistamínicos: no existe evidencia clara


de los signos vitales, para lo cual deberá esta- sobre las ventajas de utilizar uno u otro según
blecerse un plan de evaluación de los tres la disponibilidad en cada centro hospitalario.
componentes básicos ante una situación po- Pero se debe tener en cuenta que los benefi-
tencialmente crítica, el llamado “ABC inicial” cios son enormes, pues hacen parte como pie-
en cualquier situación de emergencia: man- dra angular en el tratamiento inicial y a media-
tenimiento y permeabilidad de la vía aérea, no plazo de la reacción anafiláctica e incluso
respiración (breathing) y circulación. La veloci- de la anafilactoide. Es muy importante estar
dad de aparición de los síntomas no debe im- concientes de que las presentaciones comer-
pedir los procedimientos de monitorización y ciales disponibles en nuestro país están dise-
acceso venoso necesarios, siempre y cuando ñadas para uso intramuscular o subcutáneo,
la condición clínica lo permita. Nunca se debe pero que en condiciones de emergencia y bajo
olvidar que el edema de laringe y glotis puede monitorización continua y observación espe-
generar una segunda emergencia, pues difi- cializada, pueden utilizarse por vía venosa. La
culta el acceso a la vía aérea hasta el punto utilización de antihistamínicos del tipo antiH2
de requerir todas y cada una de las medidas es motivo de discusión, pero parece haber
existentes para lograr insertar un tubo orotra- suficiente evidencia para unirla al arsenal te-
queal y garantizar el adecuado soporte ventila- rapéutico para el tratamiento de las reaccio-
torio. El tratamiento farmacológico se dispo- nes agudas
ne según la severidad y permite cierto grado
de modificación en el orden de inicio y de la Glucocorticoides: son definitivamente útiles
secuencia; pero en casos de verdaderas res- en todos los casos de reacción anafiláctica se-
puestas anafilácticas, y por supuesto en el vera y especialmente deben ser tenidos en
shock anafiláctico, la secuencia más acepta- cuenta cuando se sospeche la presencia de
da es la siguiente: shock anafiláctico idiopático, pues disminuyen
la severidad de los síntomas, la velocidad de
Adrenalina (epinefrina): se administra por vía aparición y potencialmente, la magnitud de
subcutánea en pacientes sin marcado compro- algunas manifestaciones, especialmente del
miso hemodinámico o por vía intravenosa en edema laringeo y las repercusiones cutáneas.
pacientes inestables, en dosis de 0,2 a 0,5
mg cada 15 a 20 minutos hasta la disminución Agentes agonistas beta-2 (broncodilatado-
y control de los síntomas y hasta tres dosis. res): estas sustancias hacen parte del arse-
Se presenta en ampollas de 1 mg/1 mL. En nal de tratamiento de segunda línea, pero defi-
los niños la dosis es de 0,01 a 0,05 m/kg, por nitivamente ayudan a disminuir el nivel de
una sola vez. A pesar de no existir contraindi- broncoespasmo, mejoran el patrón respiratorio
caciones absolutas en la utilización de este reduciendo el trabajo muscular y facilitan el
medicamento, deberá tenerse precaución en mantenimiento de mejores índices de oxige-
pacientes con enfermedad coronaria conoci- nación.
da y en pacientes con diversos tipos de pato-
logía cardiovascular. La adrenalina disminu- Otros agentes inhalados: cada día mas uti-
ye la capacidad de absorción de algunas sus- lizadas, son sustancias como la epinefrina
tancias por razón de la vasoconstricción local racémica y la budesonida, con aceptable efec-
en los sitios de punción o de contacto cutá- to local sobre el tejido edematizado de la la-
neo y el efecto broncodilatador por acción ringe, glotis y tráquea. La utilización de estas
sobre receptores pulmonares alfa y beta 2. sustancias es aceptada, pero se plantea

1023
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

discusión sobre los beneficios y los altos cos- más efectiva en el contexto del esquema te-
tos; además, su disponibilidad es limitada en rapéutico general.
muchos de nuestros centros de urgencias.
Debe anotarse que cuando ya se ha solucio-
Líquidos parenterales: el mantenimiento y nado la emergencia inicial, es bastante fre-
reemplazo del volumen intravascular efectivo cuente un efecto de rebote por las caracterís-
con soluciones salinas (SSN o lactato de Rin- ticas de biodisponibilidad del agente farmaco-
ger) permiten sostener los parámetros hemo- lógico o por las condiciones clínicas que ha
dinámicos cerca de lo ideal. Por ello las medi- traído consigo todo el andamiaje de la reani-
das arriba descritas de repleción del volumen mación de estos pacientes, cuyo comporta-
circulatorio deben ser consideradas como par- miento nunca es exactamente igual entre uno
te de la intervención no farmacológica tal vez y otro.

TABLA 1.MEDICAMENTOS UTILIZADOS EN EL MANEJO DEL SHOCK ANAFILÁCTICO

Medicamento Dosis Presentación


Antihistamínicos
Loratadina 10 mg Tabletas 10 mg, suspensión 5mg/5mL
Cetirizina 10 mg Tabletas 10 mg, suspensión 5mg/5mL
Ranitidina 1-1,5 mg/kg de peso Tabletas 150 mg
Glucocorticoides
Metilprednisolona 1-2 mg/kg de peso Ampollas de 4mL=500 mg, tabletas 4 mg
β2-agonistas
Salbutamol 1-2 inhalaciones Inhalador 100 mcg 200 dosis

Adaptado de Belleau JT, Lew B. Anaphylaxis and Serum Sickness. En: Conn‘s current therapy 2003. Editado por RE Rakel, ET
Bope. Saunders. Philadelphia, 2003.

LECTURAS RECOMENDADAS

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department anaphylaxis: A review of 142 patients anaphylactic reactions to antivenom for bothrops
in a single year. J Allergy Clin Immunol 2001; snake bites. BMJ 1999; 318:1451-1452.
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1024
CAPÍTULO XVIII: SHOCK ANAFILÁCTICO

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Adrenaline given outside the context of life

1025
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIX

Transfusiones. Indicaciones para el uso de sangre


y componentes sanguíneos

Nhora Villegas de Merino, MD


Jefe, Departamento de Laboratorio
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

L a transfusión de sangre es una forma sim-


ple de trasplante de un órgano. La sangre
(el órgano) se transfiere de un donante a un
La indicación clínica para una transfusión se
puede clasificar en cuatro categorías:

paciente para corregir temporalmente una de- 1. anemia aguda, que incluye la que se pro-
ficiencia o la alteración de una función. duce intraoperatoriamente;
2. anemia hemolítica;
Tanto el órgano como el paciente deben ser 3. anemia hipoproliferativa;
rigurosamente examinados para asegurar 4. anemia por pérdida crónica de sangre.
compatibilidad. El trasplante sólo está indica-
do cuando hay anormalidades específicas y Las transfusiones de glóbulos rojos no deben
se espera que el paciente-receptor sea bene- ser aplicadas simplemente por el valor de la
ficiado con el procedimiento. Una transfusión hemoglobina o del hematocrito del paciente,
puede transmitir enfermedades infecciosas y pues el organismo desarrolla una serie de
puede producir rechazo con complicaciones adaptaciones fisiológicas (Tabla 1).
serias para el receptor.

En Colombia se transfunden anualmente unas TABLA 1. ADAPTACIONES FISIOLÓGICAS A LA ANEMIA


850.000 unidades de sangre y componentes.
El componente que más se utiliza (50-60%)
es el concentrado de glóbulos rojos. Se reco- Incremento en la liberación de oxígeno:
• Aumento en la extracción de oxígeno.
lectan 426.000 unidades con una proporción
• Desplazamiento a la derecha de la curva de disociación
de separación de componentes de 2:1 por uni- de O2.
dad, cantidad que es insuficiente para atender • Incremento de los niveles de 2-3 difosfoglicerato.
los requerimientos de transfusiones del país. • Efecto Bohr.

Incremento del gasto cardiaco:


CONCENTRADO DE GLÓBULOS ROJOS • Disminución de la poscarga.
• Vasoconstricción.
• Disminución de la viscosidad sanguínea.
Tiene un volumen de 250 mL, muy poca can-
• Incremento de la contractibilidad.
tidad de plasma, leucocitos y plaquetas y el • Taquicardia.
hematocrito está entre 70% y 80%.

1026
CAPÍTULO XIX: TRANSFUSIONES. INDICACIONES PARA EL USO DE SANGRE Y COMPONENTES SANGUÍNEOS

Una pérdida menor de 15% del volumen san- volúmenes de sangre a 4º C con exceso de
guíneo total (hemorragia clase I) usualmente potasio extracelular, citrato y con bajo pH pue-
ejerce un efecto hemodinámico menor, que de producir alteraciones considerables en el
se caracteriza por vasoconstricción y taquicar- ritmo y en la contractilidad cardiaca. En la ma-
dia leve. Una pérdida de 15% a 30% del volu- yoría de los pacientes con anemia crónica se
men sanguíneo total (hemorragia clase II) pro- desarrolla una serie de mecanismos compen-
duce taquicardia y descenso en la presión del satorios, lo que hace que no haya urgencia
pulso. Pérdidas de 30-40% (hemorragia cla- en transfundir, a menos que se presenten sín-
se III) producen signos y síntomas severos de tomas de anemia severa cuando la concen-
hipovolemia, como taquicardia, taquipnea, tración de hemoglobina llegue a niveles por
hipotensión sistólica y alteración del estado debajo de 5,0 gr/dL.
mental. Pérdidas mayores del 40% (hemorra-
gia clase IV) ponen en riesgo la vida del pa-
ciente y llevan a shock severo con hipotensión RECOMENDACIONES GENERALES
y taquicardia, pulso muy débil, bajo gasto uri-
nario y marcado compromiso sensorial. 1. La transfusión de concentrado de glóbulos
rojos muy rara vez está indicada cuando la
Se cree que la provisión tisular de O 2 es ade- concentración de hemoglobina es mayor de
cuada en la mayoría de los individuos con 10 gr/dL, y casi siempre está indicada cuan-
concentraciones de hemoglobina tan bajas do es menor de 6 gr/dL, especialmente
como 7 gr/dL. En individuos sanos y normovo- cuando la disminución en la hemoglobina
lémicos se mantiene la oxigenación tisular y se debe a anemia aguda.
se tolera la anemia con valores de hematocrito 2. La determinación acerca de si concentra-
tan bajos como 18-25%. Cuando la oxigena- ciones de hemoglobina intermedias (6-10
ción tisular se hace deficiente, los tejidos y gr/dL) justifican o requieren transfusión
también el corazón, empiezan a producir áci- debe estar basada en el riesgo de compli-
do láctico a valores de hematocrito de 15-20% caciones por oxigenación inadecuada.
y la insuficiencia cardiaca se puede presentar 3. No se recomienda utilizar, considerando to-
cuando el hematocrito desciende a niveles de dos los pacientes, un valor de hemoglobina
10%. único para definir la transfusión sin tener
en cuenta los diverso factores fisiológicos
En un adulto la transfusión de una unidad de y quirúrgicos que afecten la oxigenación;
glóbulos rojos aumenta el hematocrito en pro- 4. Cuando sea apropiado se debe considerar
medio en un 3% y la concentración de hemo- donación autóloga predepósito, recupera-
globina en 1 gr/dL; en los niños esta eleva- ción de sangre peri o postoperatoria,
ción se consigue con transfundir 3 mL/kg. hemodilución normovolémica aguda y otras
medidas para ahorro de sangre (hipoten-
En la hemorragia aguda la transfusión de gló- sión deliberada y agentes farmacológicos).
bulos rojos debe administrarse tan rápido co- 5. La sangre debe ser administrada unidad
mo sea necesario para corregir el déficit en el por unidad de acuerdo a los signos y sín-
transporte de O2, evaluando las consecuen- tomas, pues una sola unidad puede ser su-
cias metabólicas que pueden presentarse ficiente para corregir la falta de oxigena-
cuando la transfusión se hace de una manera ción y la hipovolemia;
rápida y masiva. La infusión rápida, en un vaso 6. La transfusión debe considerarse sólo
sanguíneo cercano al corazón, de grandes cuando la infusión de cristaloides falla en

1027
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

la corrección de la depleción del volumen cada (vitamina B12, ácido fólico,


circulatorio. eritropoyetina, hierro).
2. Tratamiento establecido para talasemias y
drepanocitosis.
RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS 3. Transfundir para minimizar los síntomas de
anemia, generalmente entre niveles de
Anemia aguda: hemoglobina de 5-8 gr/dL.
1. Asegurar que el paciente está normo-
volémico.
2. Restaurar el volumen intravascular con Transfusión en neonatos:
cristaloides. Las transfusiones en neonatos generalmente
3. Evaluar el riesgo de isquemia o de empeo- se administran en pequeñas cantidades: 10-
rar otra enfermedad concomitante. 20 mL/kg. Por el alto riesgo de múltiples ex-
4. Estimar y/o anticipar el grado de pérdida posiciones a diferentes donantes se recomien-
de sangre: da asignar una unidad de glóbulos rojos a un
>30-40% de pérdida rápida de sangre: solo individuo.
transfundir glóbulos.
5. Determinar concentración de hemoglobina Los recién nacidos pretérmino o inmunodefi-
>10 gr/dL: generalmente no se requiere cientes se deben transfundir con glóbulos rojos
transfusión leucorreducidos y en lo posible las unidades
< 7 gr/dL: generalmente se requiere trans- deben ser citomegalovirus negativas. Las uni-
fusión dades de glóbulos rojos también pueden ser
7-10 gr/dL: la transfusión está indicada irradiadas para disminuir el riesgo de la en-
dependiendo de otros factores fermedad injerto contra huésped.
6. Determinar signos vitales y oxigenación
tisular (útil cuando la Hb está entre 6- 10gr/ Es conveniente calentar la sangre y los
dL y se desconocen las pérdidas de componentes sanguíneos que se transfundan
sangre). en los neonatos, especialmente en casos de
grandes volúmenes o en exanguineotrans-
Pacientes con los factores de riesgo que se fusión.
exponen a continuación no toleran adecua-
damente una disminución aguda del volumen Exanguineotransfusiones: se debe seleccio-
intravascular: nar sangre total fresca, de no más de 4 días
de almacenamiento, negativa para citomega-
• Pacientes en riesgo de presentar isquemia loviorus, leucorreducida o concentrado de gló-
miocárdica, enfermedad coronaria, con val- bulos rojos reconstituido con plasma fresco
vulopatía cardiaca o insuficiencia cardiaca congelado, albúmina o fracción de proteínas
congestiva. plasmáticas.
• Pacientes en riesgo de isquemia cerebral,
con historia de isquemia cerebral transito-
ria o eventos trombóticos previos. CONCENTRADO DE PLAQUETAS
Anemia crónica: Una unidad obtenida de un solo donante debe
1. Tratamiento con el agente farmacológico contener por lo menos 5,5 x 10 10 plaquetas.
específico según la deficiencia diagnosti- Una unidad de plaquetoféresis debe contener

1028
CAPÍTULO XIX: TRANSFUSIONES. INDICACIONES PARA EL USO DE SANGRE Y COMPONENTES SANGUÍNEOS

por lo menos 30 x 1010 plaquetas, lo que la penia por producción disminuida cuando el
hace equivalente a 6 unidades de plaquetas recuento de plaquetas es mayor de
de un solo donante. La decisión de transfundir 100.000/µL y está generalmente indicada
plaquetas depende de la condición clínica del cuando el recuento de plaquetas es menor
paciente, la causa de la trombocitopenia, el a 50.000/µL.
recuento de plaquetas y la capacidad funcio- • Los casos de parto vaginal o de procedi-
nal de las plaquetas del paciente. Se requie- mientos quirúrgicos se pueden llevar a cabo
ren dosis mayores en pacientes con fiebre, con recuento de plaquetas menores de
sepsis o esplenomegalia. 50.000/µL, pues éstos procedimientos ge-
neralmente están asociados con pérdidas
En general la dosis es de 6 a 10 unidades insignificantes de sangre.
para el adulto y 1 unidad por 10 kg de peso • La transfusión de plaquetas puede estar
corporal en los niños. Se espera que cada uni- indicada a pesar de un recuento adecuado
dad aumente el recuento plaquetario en 7.000/ de plaquetas cuando se sospeche un de-
mL en un adulto de 70 kg de peso que no sea fecto cualitativo en la función plaquetaria.
refractario. En los neonatos 10 mL/kg aumen- • La incidencia de pacientes refractarios a
tan el recuento en 50.000-100.000/µL transfusión de plaquetas por aloanticuerpos
puede disminuirse, especialmente en pa-
Para controlar la efectividad de las transfusio- cientes oncológicos, si los productos son
nes de plaquetas se debe hacer un recuento leucorreducidos por filtración antes de
dentro de las 24 horas previas a la solicitud transfundirlos.
de dicha transfusión y el recuento post-transfu- • En los pacientes con púrpura trombocitopé-
sión debe hacerse a la mañana siguiente de nica idiopática no se debe transfundir pla-
la transfusión del concentrado. Si dos trans- quetas, pues el tratamiento de elección es
fusiones consecutivas no producen el incre- con drogas tales como glucocorticoides,
mento esperado, se debe evaluar la efectivi- inmunoglobulina intravenosa y esplenecto-
dad de las siguientes transfusiones de plaque- mía, dependiendo de la severidad de la
tas, haciendo un recuento 30-60 minutos des- enfermedad.
pués de terminada la transfusión. Si tres trans-
fusiones de plaquetas en el transcurso de dos
semanas no producen el incremento espera- RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS
do, se debe considerar que el paciente es “re-
fractario” a las mismas. 1. Hemorragia activa con un recuento de pla-
quetas inferior a 50 x 109 /L (<50.000/µL).
2. Transfusión profiláctica en pacientes con
RECOMENDACIONES GENERALES recuentos menores de 15-20 x 109/L (<15-
20.000/µL) cuando existen otros hallazgos
• La transfusión profiláctica de plaquetas no clínicos tales como fiebre (>38ºC), infección,
es efectiva y está generalmente contraindi- coagulopatía, CID o marcada esplenome-
cada cuando la trombocitopenia es debida galia. En ausencia de estos factores, la
a destrucción plaquetaria, como en la púr- transfusión plaquetaria está razonablemente
pura trombocitopénica idiopática. indicada si el recuento es <10.000/uL
• La transfusión profiláctica de plaquetas no 3. Pacientes que van a ser sometidos a ciru-
está generalmente indicada en pacientes gía mayor y que tienen recuentos meno-
quirúrgicos u obstétricos con trombocito- res de 50 x 109/L (<50.000/µL).

1029
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

4. Coagulación intravascular diseminada con • Para reemplazo en plasmaféresis en pa-


trombocitopenia. cientes con púrpura trombocitopénica
5. Coagulopatías posteriores a transfusiones rombótica.
masivas. • En neonatos la dosis es 10-20 mL/kg .
6. Trombocitopenia neonatal aloinmune cuan-
do el recuento sea menor de 20.000/µL.
7. En neonatos la dosis es de 20 mL/kg. CRIOPRECIPITADO
Cada unidad de crioprecipitado es un concen-
PLASMA FRESCO CONGELADO trado de factor VIII (80-120 unidades), fibrinó-
geno (150-250 mg/dL), fibronectina (30-50
Es el plasma que se obtiene de donaciones mg), factor de von Willebrand (40-70%) y fac-
individuales de sangre y se procesa en las pri- tor XIII (20-30%).
meras 6 horas de la recolección. Este plasma
se mantiene congelado a una temperatura de La dosis recomendada en pacientes adultos
- 20ºC, y una vez descongelado tiene una vida con hipofibrinogenemia es de 8-10 unidades.
útil de 24 horas. Contiene aproximadamente
400 mg de fibrinógeno y 200 unidades de otros
factores de coagulación. El reemplazo total de RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS
un volumen sanguíneo deja al paciente con
aproximadamente una tercera parte de sus • Profilaxis en pacientes que presentan defi-
factores de coagulación. ciencia congénita de fibrinógeno o enferme-
dad de von Willebrand que no responda al
El volumen a transfundir es 10-15 mL/kg, ex- tratamiento con DDAVP (desmopresina).
cepto cuando hay urgencia de revertir la • Episodios hemorrágicos en pacientes con
anticoagulación con warfarina y es suficiente hipo o disfibrinogenemias o con enferme-
una dosis de 5-8 mL/kg. dad de von Willebrand.
• Corrección de hemorragia microvascular en
pacientes transfundidos masivamente con
RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS concentraciones de fibrinógeno menores a
80-100 mg/dL o cuando la concentración
• Revertir con urgencia el tratamiento con de fibrinógeno no pueda ser determinada
warfarina. en forma continua.
• Corregir deficiencias de factores de coa- • En pacientes con hemofilia A (deficiencia
gulación para los cuales no haya disponi- de factor VIII) no se recomienda el uso a
bilidad del factor específico. repetición de crioprecipitado en estados
• Corregir hemorragia microvascular cuan- hemorrágicos debido a la posibilidad de
do el tiempo de protrombina (TP) y el tiem- transmisión de enfermedades infecciosas.
po parcial de tromboplastina (TPT) estén Estos pacientes deben ser tratados con
1,5 veces por encima del valor normal. concentrados comerciales de factor VIII.
• Corregir hemorragia microvascular secun-
daria a deficiencia de factores de coagula-
ción en pacientes transfundidos con más SANGRE TOTAL
de un volumen sanguíneo cuando no es
posible determinar el TP o el TPT de ma- Una unidad de sangre total contiene 400 mL
nera continua. de sangre y más de 63 mL de anticoagulante-

1030
CAPÍTULO XIX: TRANSFUSIONES. INDICACIONES PARA EL USO DE SANGRE Y COMPONENTES SANGUÍNEOS

preservativo; su hematocrito es 35-45%. Des- 3.2 Cuando no hay disponible sangre/gló-


pués de 24 horas de almacenada tiene muy bulos rojos de grupo específico
pocos leucocitos y plaquetas viables y nive- 3.3 En todas las mujeres en edad repro-
les de factores V y VIII disminuidos. ductiva
3.4 En todos los adolescentes menores de
Las indicaciones para transfundir sangre total 18 años
son mínimas y se reducen a cirugía cardiaca 4. A una paciente Rh negativo, en edad re-
(bypass coronario), oxigenación de membra- productiva, a quien se le hayan transfun-
na extracorpórea y exanguinotransfusiones en dido glóbulos rojos Rh positivos, se le debe
neonatos. dar globulina anti-Rh en las siguientes 24
horas después de haber sido transfundida.

TRANSFUSIÓN DE SANGRE Y
COMPONENTES EN SITUACIONES REACCIONES ADVERSAS
DE URGENCIA
Agudas mediadas por inmunidad:
En el caso de un paciente en estado de shock 1. Reacción hemolítica aguda.
hemorrágico que requiere transfusión urgen- 2. Reacción febril (inducida por leucocitos o
te de concentrado de glóbulos rojos, se debe citocinas).
intentar tomar muestras, pero si no es posible 3. Aloinmunización a leucocitos o plaquetas.
se puede utilizar la sangre proveniente del si- 4. Reacciones alérgicas.
tio de la hemorragia para realizar las pruebas 5. Daño pulmonar relacionado con transfusión
pretransfusionales. (TRALI).
6. Anafilaxis aguda por anti-IgG.
1. Se debe tratar de determinar el grupo ABO
y el Rh del paciente y transfundirle inme- Tardías mediadas por inmunidad:
diatamente sangre del grupo específico y, 1. Reacción hemolítica aguda.
paralelamente, se deben iniciar las prue- 2. Formación de nuevo anticuerpo.
bas de compatibilidad. 3. Púrpura postransfusional, su presentación
es rara.
2. Se deben usar glóbulos rojos 0 Rh positivo 4. Enfermedad injerto contra huésped cuya
en los siguientes casos: frecuencia es desconocida.
2.1 Cuando no hay tiempo para determi- 5. Inmunosupresión cuya frecuencia es des-
nar el grupo sanguíneo conocida.
2.2 Cuando no hay disponible sangre/gló-
bulos rojos de grupo específico Agudas no mediadas por inmunidad:
2.3 En todos los pacientes masculinos ma- 1. Sobrecarga circulatoria.
yores de 18 años y mujeres que no están 2. Contaminación bacterial de la unidad.
en edad reproductiva. 3. Unidad hemolizada mecánicamente.
4. Unidad hemolizada por calentamiento in-
3. Se deben usar glóbulos rojos 0 Rh negati- apropiado.
vo en los siguientes casos: 5. Unidad hemolizada por cambio osmótico.
3.1 Cuando no hay tiempo para determi- 6. Trombopatía inducida por unidad muy fría.
nar el grupo sanguíneo

1031
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Crónicas no mediadas por inmunidad: 3. Goodnough L, Brecher M, Kanter M, et al.


1. Hemosiderosis postransfusional. Transfusion medicine. First of two parts. Blood
2. Infecciones virales (CMV, HAV, HBV, HCV, transfusion. N Engl J Med 1999; 340:438-446.
4. Hebert P, Wells G, Blajchman M. A multicenter
HGV, HTLV-I/II, HIV-1, HIV-
randomized controlled clinical trial of transfusion
3. Parásitos (Plasmodium especies, Babesia requirements in critical care. N Eng J Med 1999;
microti, Trypanosoma cruzi, Leishmania 340: 409-417.
especies). 5. Hoffman R, Benz E, Shattil S. Hematology basic
principles. Thirt edition. Transfusion Medicine.
Churchill Livingston. New York, 2000
LECTURAS RECOMENDADAS 6. Simon T, Alverson D, AuBuchon J, et al. Practice
parameter for the use of red cell blood transfusions.
1. American Society of Anesthesiologists. Task for- Arch Path Lab Med 1988; 122:130-138.
ce on blood component therapy. Practice 7. Welch H, Meehan K, Goodnough L. Prudent
guidelines for blood component therapy. strategies for elective red blood cell transfusion.
Anesthesiology 1996; 84:732-747. Ann Int Med 1992; 116:393-402.
2. Carson L, Duff A, Poses R, et al. Effect of anemia
and cardiovascular disease on surgical mortality
and morbility. Lancet 1996; 348:1055-1060.

1032
CAPÍTULO XX: ACCIDENTE OFÍDICO

CAPÍTULO XX

Accidente ofídico

Patricia Salcedo Vélez, MD.


Coordinadora de Medicina Interna,
Departamento de Urgencias
Fundación Cardioinfantil,
Instituto de Cardiología

INCIDENCIA

S e estima que en el mundo ocurren


5´400.000 mordeduras de serpientes en
el año, de las cuales 2´682.500 producen en-
La atención de las víctimas de estos acciden-
tes es generalmente deficiente, por cuanto
usualmente ocurren en zonas alejadas de los
venenamiento y 125.345 personas mueren. centros urbanos, con pocas posibilidades de
En Latinoamérica ocurren 150.000 acciden- acceso temprano a los sistemas de salud; ade-
tes con envenenamiento y mueren 5.000 per- más, la costumbre de consultar en forma tar-
sonas cada año. día empeora el pronóstico. Casi siempre los
pacientes llegan al hospital después de trata-
En Colombia el accidente ofídico representa mientos de medicina alternativa que general-
un problema de salud pública. Cada año se mente producen mayor morbilidad y mortali-
reportan 2.000-3.000 accidentes, con una tasa dad por la contaminación de la herida con la
de mortalidad de 7,5/100.0000 habitantes. flora de la boca al succionar la zona de la mor-
Como no es una entidad de reporte obligato- dedura, o con el uso de emplastos de sustan-
rio, no se dispone de datos de seguimiento cias como tabaco y hojas de árboles. Además,
actualizados, con una mayor frecuencia de hay neutralización tardía del veneno, cuando
accidentes botrópicos de 89-99%. en el mejor de los casos el personal de salud,
y en especial los médicos -en su mayoría en
Las personas de mayor riesgo son los hom- año social obligatorio-, conocen la forma de
bres que habitan en áreas rurales de países tratamiento y tienen a su alcance sueros
tropicales, en especial los que trabajan en el antiofidicos.
campo en las épocas de lluvia y en las horas
de la tarde; los niños les siguen en frecuencia
de riesgo. BIOLOGÍA
La mayoría de los casos informados en Co- Los animales de sangre fría habitan a cualquier
lombia se presenta en los departamentos de altitud por debajo de los 3.000 metros. Los
Antioquia, Chocó, Meta, Norte de Santander, ofidios o serpientes son una subespecie de la
Casanare, Caldas y Cauca. clase de los reptiles; se caracterizan por ser
de cuerpo largo, flexible y delgado, sin patas ni

1033
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

párpados, ausencia o reducción del pulmón iz- • Proteroglifas: poseen colmillos pequeños
quierdo y con oído externo. Tienen una hilera y fijos ubicados en la parte anterior del ma-
ventral de escamas agrandadas que les per- xilar superior, con un surco por el que fluye
miten desplazarse con facilidad hacia adelan- el veneno que inoculan al atacar a su víc-
te y atrás en el suelo, lengua larga, bifurcada y tima. En este grupo están las corales, las
fácilmente reversible, numerosas vértebras cobras, las mambas y las serpientes de
(200 a 400), gran movilidad de la quijada, que mar. Todas son de alto riesgo para el
posee una o dos hileras de dientes. Para loca- hombre.
lizar su alimento tienen fosas termo recepto- • Solenoglifas: se caracterizan por dos col-
ras o lentes ambarinas en los ojos. millos grandes en la parte anterior del maxi-
lar superior que pueden alcanzar hasta 4
Se desplazan a velocidades menos rápidas cm de longitud. Este colmillo tiene un ca-
de lo que se cree, entre 1-6 km/hora; la más nal cerrado y forma un ángulo de 90 gra-
rápida de Colombia es la “fueteadora” o “lomo dos en el momento del ataque. En el conti-
de machete”, del género Chironius carinatus, nente americano son las más peligrosas
una culebra inofensiva que cuando se asusta para el hombre. Sus características anató-
huye a gran velocidad. micas y funcionales, así como su tamaño,
les permite inocular el veneno, aun a tra-
Todas las serpientes son carnívoras. La ma- vés del calzado y la ropa.
yoría se alimenta de ratones, pero también
pueden ingerir pájaros, ranas, peces, babo- Las serpientes que se encuentran en Colom-
sas, insectos o caracoles. Su ciclo de vida se bia se agrupan en ocho familias, de las cua-
inicia con la postura de huevos que no requie- les seis de ellas, con cerca de 200 especies,
ren incubación, especialmente en el trópico. no representan un riesgo para el hombre.

Las características de sus dientes permiten Viperidae: las serpientes venenosas conoci-
clasificarlas y determinar el tipo de agresión das como víboras, son solenoglifas, con ca-
al evaluar la distribución de las heridas en un beza triangular, pupila elíptica por su hábito
paciente con mordedura, así: nocturno y con gran número de escamas en
la parte superior. La subfamilia Crotalinae se
• Aglifas: carecen de colmillos inoculadores encuentra representada en Colombia; son las
de veneno, capturan e ingieren viva a su únicas que tienen fosas nasales y fosas
presa y no representan un riesgo para el termorreceptoras.
hombre, excepto las anacondas que han
causado casos fatales por constricción y Hay 6 géneros (todos clasificados antes como
asfixia de su presa. Bothrops) y 14 especies así:
• Opistoglifas: tienen dos colmillos peque- • Genero Bothriechis con una especie co-
ños inoculadores de veneno en la parte múnmente conocida como víbora de tierra
posterior del maxilar. Inoculan el veneno fría, víbora de pestaña o colgadora.
mientras tienen aprisionada a su presa en • Bothrocophias conocidas popularmente
la boca; no generan un peligro para el hom- como cuatronarices, guata o jergón.
bre por la escasa cantidad de veneno que • Bothrops con cuatro especies, conocidas
inoculan, que apenas podría ocasionar una como mapaná, taya x, rabiseca o jararaca.
pequeña reacción local de edema y dolor • Porthidium con dos especies, conocidas
leve. como patoco, patoquilla, veinticuatro, sapa.

1034
CAPÍTULO XX: ACCIDENTE OFÍDICO

• Bothriopsis con tres especies, conocidas DEFINICIÓN


popularmente como rabo de chucha, loro,
rabiseca o mapaná. El accidente ofídico se define como la lesión
que resulta de la mordedura de una serpien-
Elapidae: son serpientes venenosas, protero- te, sea que deje o no consecuencias para la
glifas, de hábitos nocturnos y poco agresivas; salud.
se encuentran 4 géneros en Colombia con 28
especies.
VENENOS
• Micrurus: 22 especies, conocidas popular-
mente como corales o rabo de ají. El veneno de las serpientes es una mezcla de
• Pelamos: una especie, Palemis pleturus o proteínas, polipéptidos y sustancias no protei-
serpiente de mar. cas como las aminas (histamina, bradicidina,
• Crotalus tres especies, conocidas como serotonina y acetil colina), que son las cau-
cascabel suramericana. santes del intenso dolor, del edema y de la
• Lachesis: una especie, conocida como caída de la tensión arterial. La dosis letal va-
verrugosa o rieca. ría de acuerdo con la especie.

Boidae: en Colombia se encuentra 6 géneros Los componentes proteicos contienen enzi-


y 8 especies conocidas comúnmente como mas que causan los principales efectos en las
boas, tragavenados, guíos y anacondas. víctimas. La fosfolipasa 2 actúa como antico-
Eunectes murinus, la serpiente mas larga del agulante, y la miotoxina puede actuar también
mundo, alcanza hasta 10 metros de longitud como neurotoxina y producir hemólisis. El ve-
y puede matar al hombre por constricción. neno de la familia Viperidiade contiene un gru-
po de proteínas responsable de las lesiones
Colubridae: en Colombia hay 51 géneros y locales, necrosis y hemorragias. Dentro de las
160 especies conocidas vulgarmente como proteasas específicas existe una trombina que
culebras. No están relacionadas con accidente produce fibrinógeno de baja calidad y es la
ofídico venenoso en nuestro país. responsable de la hemorragia.

Aniliidae: en Colombia la única especie des- Existe una gran variedad de neurotoxinas, es-
crita es la falsa coral que representa un ries- pecialmente en los géneros Micrurus, Pelamis
go para el hombre. y Crotalus, cuyo veneno bloquea la transmi-
sión nerviosa de la placa neuromuscular, a
Lectotyphloidae: en Colombia se han des- nivel pre y postsináptico, lo cual ocasiona pa-
crito un género y ocho especies; se alimen- rálisis flácida.
tan de insectos.

Typhloidae: se ha encontrado una especie en


Colombia, no representa un riesgo para el ENVENENAMIENTO BOTHROPICO
hombre.
Es ocasionado por serpientes de los géneros
Anomalepididae: representadas en Colom- Bothros, Bothrocopias, Bothriechis y Porthi-
bia por tres géneros y siete especies, no es- dium. Representa entre 90% y 95% de los
tán implicadas en accidente ofídico venenoso. accidentes ofidicos en Colombia.

1035
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Bothriechis schelegelii. MANIFESTACIONES CLÍNICAS SISTÉMICAS


• Bothrops atrox.
• Bothrops brazili. 1. Sangrado que puede ser gingival, digesti-
• MicrophtalmusIlineata. vo, pulmonar o en cualquier otra parte del
• Bothriopsis punctata. organismo.
• Porthidium nasutum. 2. Hipotensión por acción del veneno y/o por
causa de la hemorragia.
3. Síntomas neurológicos por trastornos hi-
MECANISMO DE ACCIÓN DEL VENENO droelectrolíticos, anemia y/o hemorragia
intracraneana.
El veneno tiene tres efectos principales que 4. Oliguria o anuria como consecuencia de in-
pueden variar en intensidad según la espe- suficiencia renal aguda producida por daño
cie, edad y ubicación geográfica de la del endotelio renal o hipoperfusión renal.
serpiente. 5. En las mujeres embarazadas hay contrac-
ciones, aborto o desprendimiento de
1. Necrosante: se produce por la acción de placenta.
miotoxinas. Es importante tener en cuenta
que el edema puede causar necrosis del
DIAGNÓSTICO
tejido al elevar la presión compartimental.
2. Coagulante: se debe a la acción de enzi- Se debe completar una historia clínica, hacien-
mas procoagulantes sobre la protombina y do énfasis en:
el factor X, que llevan a coagulopatía de
consumo.1 1. Síntomas presentados después de la mor-
3. Hemorrágico: se ocasiona por daño en el dedura, los cuales ayudan a determinar la
endotelio vascular.1 especie causante y a orientar la conducta
médica inmediata.
• Intensidad del dolor
MANIFESTACIONES CLÍNICAS LOCALES • Síntomas neurológicos.
2. Tiempo entre el accidente y la consulta.
1. Edema que compromete toda la extremi- 3. Circunstancias en las que ocurrió el acciden-
dad y que aumenta rápidamente en la pri- te, lo que permite saber si fue provocado,
mera hora para alcanzar su máximo a las como ocurre cuando la serpiente se pisa y
24 horas, con una resolución lenta que pue- ésta inocula la mayor cantidad de veneno.
de durar varios días. 4. Características de la serpiente causante
2. Dolor intenso e inmediato. para establecer si es o no venenosa.
3. Flictenas que pueden ser hemorrágicas. 5. Parte del cuerpo donde recibió la morde-
4. Hemorragia por los orificios creados por los dura.
colmillos, como consecuencia del consu- • Establecer si es zona de alto riesgo,
mo del fibrinógeno y el daño del endotelio como el cuello.
vascular. • Establecer si la zona de mordedura tenía
5. Necrosis de piel y músculos, como las algún tipo de protección como calzado.
mayores secuelas en las victimas de estos 6. Antecedentes de tratamientos y prácticas
accidentes. no médicas previas.
6. Sobreinfección frecuente de la herida. 7. Antecedentes de aplicación de suero antio-
fídico u otro suero heterólogo, por el riesgo

1036
CAPÍTULO XX: ACCIDENTE OFÍDICO

de reacción alérgica o shock anafiláctico con 1. Tiempo de coagulación: es especialmente


la nueva aplicación del suero antiofídico. útil en áreas rurales y sitios donde no se
dispone de laboratorio, pues no requiere
El examen físico debe ser lo más completo reactivos ni equipos y es menos costoso.
posible, encaminado a buscar alteraciones o El valor de referencia es de tres minutos.
manifestaciones como: Se considera que está prolongado cuando
es mayor de 15 minutos. Es necesario rea-
1. Cambios en los signos vitales. lizar la prueba al ingreso y cada seis horas
2. Signos de sangrado sistémico. hasta que se normalice.
3. Sitio de la mordedura: ayuda a determinar 2. Fibrinógeno: el valor de referencia es 200
el tamaño de la serpiente y si es o no ve- a 400 mg/dL.
nenosa. 3. Productos de degradación del fibrinógeno:
• Evaluar si hay sangrado local. >10 mg/dL.
• Distancia entre los orificios dejados por 4. Dímero D: <500 mg/dL
los colmillos. 5. Tiempo parcial de tromboplastina (PTT):
4. Miembro afectado. depende del lote del laboratorio, aproxima-
5. Examen neurológico. damente 30-40 segundos.
6. Tiempo de protombina (PT): el valor de re-
ferencia depende del lote del laboratorio,
EXÁMENES PARACLÍNICOS aproximadamente 11-13 segundos.
7. Hemograma y recuento de plaquetas para
No son necesarios, pero ayudan a confirmar valorar anemia y trombocitopenia.
el estado de la coagulación y medir las posi- 8. Uroanálisis en busca de hematuria.
bles complicaciones:

CLASIFICACIÓN DEL ACCIDENTE BOTRÓPICO


LEVE MODERADO SEVERO
Número de ampollas Dos de suero polivalente Cuatro de suero polivalente Seis a diez de polivalente
de suero antiofidico del Instituto Nacional de del Instituto Nacional de del Instituto Nacional de
Salud o tres de otra marca, Salud o seis de otra marca, Salud o seis a diez de otra
o dos de monovalente o cuatro de monovalente marca, o seis monovalentes
Dolor Leve Moderado a severo Intenso
Edema Un solo segmento Dos segmentos Tres segmentos
Ejemplo: pie Ejemplo: pie y pierna Ejemplo: pie, pierna y muslo,
o extendido al tronco
Sangrado Local y escaso Local y en otro órgano como Sangrado local profuso
gingivorragia, hematuria o y en más de un órgano
hemorragia en heridas recientes
Necrosis Cambios en la piel ausentes Flictenas escasas sin necrosis Flictenas abundantes y
necrosis alrededor
de la mordedura o más extensa
Compromiso otros órganos No tiene Por sangrado Insuficiencia renal aguda y/o
Sistema nervioso central
Signos vitales Normales Hipotensión Hipotensión y/o shock
Tiempo de coagulación Prolongado No coagula No coagula

1037
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO TRATAMIENTO ESPECÍFICO


PRIMEROS AUXILIOS Para este tipo de mordedura, el suero antio-
fídico constituye la única modalidad de ma-
nejo efectivo.
Se deben llevar a cabo en el área de ocurren-
cia del accidente y lo más pronto posible. 1. Está compuesto por inmunoglobulinas ob-
tenidas a partir de plasma de animales nor-
• Tranquilizar a la víctima. males hiperinmunizados con pequeñas
• Dejar sangrar la herida por uno a cinco dosis de veneno de serpiente venenosa.
minutos. 2. La cantidad de antiveneno que se debe
• Exprimir los bordes de la herida en los pri- prescribir se calcula de acuerdo a la canti-
meros 30 minutos. dad de veneno por neutralizar. El cálculo
• Limpiar y desinfectar el área de la herida. se realiza teniendo en cuenta la clasifica-
• Cubrir con un aposito estéril. ción de la severidad arriba descrita; la do-
• Inmovilizar la extremidad en posición neu- sis en niños es igual a la de los adultos.
tra y ligeramente por debajo del corazón. 3. La cantidad de suero antiofídico debe
• Remitir a un centro para tratamiento espe- diluirse en 250 mL de solución salina nor-
cífico. mal en adultos o en 100 mL en niños.
4. El tiempo de infusión es de 30 minutos a
QUÉ NO HACER una hora, con supervisión continua del es-
tado del paciente y de sus signos vitales.
• No hacer incisiones en los orificios de la NOTA: En los pacientes que ingresan con tor-
mordedura. Aumenta el riesgo de infección niquete o banda compresiva, se les debe reti-
y el sangrado. rar después de la infusión del antiveneno.
• No colocar torniquetes o vendajes ajusta-
dos. Aumentan el riesgo de necrosis. Se debe repetir las dosis de antiveneno en
• No succionar con la boca. Aumenta el ries- los siguientes casos:
go de infección y el sangrado. • La evolución del paciente no muestra mejo-
• No suministrar bebidas alcohólicas. Pue- ría del tiempo de coagulación a las 12 horas.
de confundir la evaluación del compromi- • El edema sigue progresando.
so neurológico. • Aumenta la necrosis.
• No realizar choques eléctricos. Aumenta el • La tensión arterial no se estabiliza.
área de necrosis. • El estado general no mejora.
• No aplicar hielo local. Aumenta la necrosis • La hemorragia no desaparece.
y conserva el veneno.
• No aplicar sustancias químicas ni extrac- Es importante tener en cuenta que el edema
tos de plantas sobre las mordeduras. Au- y la necrosis solo se neutralizan parcialmente
menta la necrosis y la infección. por el antiveneno, especialmente cuando su
• No elevar la extremidad. Aumenta la circu- aplicación es tardía.
lación y diseminación del veneno en la ex-
tremidad. Repetir cuantas veces sea necesario para
controlar las condiciones anteriores. Nunca es
tarde para aplicar el antiveneno cuando hay
envenenamiento sistémico, así haya transcu-
rrido una semana después de la mordedura.

1038
CAPÍTULO XX: ACCIDENTE OFÍDICO

MARCAS DE SUEROS ANTIOFÍDICOS DISPONIBLES EN COLOMBIA


ANTIVENENO DE50mg de veneno neutralizado SITIO DE PRODUCCIÓN
mL de veneno
MONOVALENTE ANTIBOTROPICO 4, 8 Instituto Nacional de Salud Bogotá,
LIQUIDO Colombia
POLIVALENTE LIQUIDO 10,2 Instituto Nacional de Salud Bogotá,
Colombia

MONOVALENTE ANTIBOTRÓPICO 5,8 Instituto Butantan Brazil


POLIVALENTE LIOFILIZADO 3,9 Instituto Clodomiro Picado Costa Rica
POLIVALENTE LIOFILIZADO 2,4 MYN México

NOTA: Recuerde que los sueros líquidos deben mantenerse refrigerados entre 2°C y 8°C y los liofilizados mantenerse
a temperatura ambiente.

Se recomienda sólo realizar prueba de sensi- de antihistamínico como clemastina o hidroxi-


bilidad en pacientes con antecedentes de re- cina y media ampolla de adrenalina subcutá-
acciones alérgicas severas conocidas o que nea de 1 mg/dL.
hayan recibido suero obtenido de caballo.

Una pequeña cantidad de suero antiofidico TRATAMIENTO GENERAL


puede desencadenar una reacción urticarifor-
me con abones, mialgias, escalofríos, edema El manejo general del paciente esta encamina-
angineurótico, hipotensión y broncoespasmo; do a mantener y mejorar el estado del pacien-
estas reacciones se presentan en menos de te y evitar las complicaciones. Consiste en:
5% de los pacientes. Pero la reacción puede
ser tan severa que produzca shock anafiláctico 1. Reestablecimiento del volumen circulato-
y comprometa la vida del paciente. rio: administrar 500 a 1.000 mL de solu-
ción salina o lactato de Ringer a chorro (en
La prueba de sensibilidad se realiza con 0,1 niños 30 mL/kg de peso en bolos repetitivos
mL de suero antiofídico más 9,9 mL de solución hasta recuperar la tensión arterial).
salina estéril. De esta mezcla se aplica 0,1 mL 2. Vigilar la diuresis sin sonda si el estado
intradérmico en el antebrazo y de manera si- general del paciente lo permite. Los adul-
multánea 0,1 mL de solución salina estéril en tos deben orinar 0,5 mL/kg/hora y los ni-
el brazo contrario. Se espera 15 minutos. La ños por lo menos 1 mL/kg/hora.
prueba es positiva si aparece una pápula de 3. Si los volúmenes de orina son inferiores a
más de 10 mm de induración y enrojecimiento. los deseados, administrar un bolo de líqui-
dos. Si el volumen no se reestablece con
Si el paciente resulta alérgico (prueba positi- esta conducta, aplicar 1-2 mg/kg de peso
va), antes de aplicar el antiveneno es nece- de furosemida en cada bolo. Anotar las ca-
sario aplicar una ampolla de cortisona, dexa- racterísticas de la orina por la posibilidad
metasona o betametaxona más una ampolla de hematuria.

1039
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

4. Vigilar la coagulación al iniciar el tratamien- co y en los severos seis o más días. Este
to y a las 6, 12, 24 y 48 horas. Corregir tiempo se puede prolongar si existe fa-
repitiendo las dosis de suero antiofídico. lla renal, compromiso cerebral o alguna
5. Evitar la infección secundaria en el‘área de complicación.
la mordedura:
• Lavado del sitio de la mordedura con
abundante solución salina y jabón. COMPLICACIONES
• Cubrir con un aposito estéril sin vendaje.
• Mantener la extremidad al mismo nivel • Infección local: se presenta en 10-18% de
de la cama. los casos, especialmente en casos seve-
• Desbridar las áreas necróticas, drenar ros. Tratar con antibióticos para Gram posi-
los abscesos y cultivar la secreción ob- tivos, Gram negativos y anaerobios. Es un
tenida para enfocar la terapia antibiótica. manejo muy similar al de las infecciones
• Retirar con jeringa estéril las flictenas, necrotizantes de la piel y tejidos blandos,
según criterio médico. según la guía respectiva en esta misma
• Profilaxis antitetánica con toxoide tetá- serie.
nico o globulina humana hiperinmune, • Necrosis y pérdida de tejido: aparece en
según los antecedentes de vacunación 16% de los casos. Se debe manejar con
del paciente (ver guía de Tétanos en cuidados de la herida para evitar llegar a
esta misma serie). fasciotomía y/o amputación.
6. El uso profiláctico de antibióticos no esta • Falla renal: ocurre en 5-11% de los casos;
recomendado en esta guía. Solo iniciar te- se debe manejar con la administración de
rapia antibiótica cuando se diagnostique in- líquidos y vigilancia de trastornos electrolí-
fección, con medicamentos con cubrimien- ticos y/o ácido-base.
to de cocos Gram positivos, bacilos Gram • Síndrome compartimental: en 3-9% de los
negativos y anaerobios. Las asociaciones casos. Manejar con fasciotomía y rehabili-
pueden ser: tación.
• Penicilina G a altas dosis más animoglu- • Amputaciones: se hacen necesarias en 1-
cósidos. 8% de los casos; manejar la cicatrización
• Cloranfenicol más aminoglucósidos. y la rehabilitación.
• Clindamicina más aminoglucósidos. • Hemorragia: en caso de anemia severa,
• Oxacilina más trimetoprim-sulfameto- corregir con transfusión de glóbulos rojos.
xasol. En el manejo rutinario no se requieren plas-
• Ampicilina más metronidazol. ma, vitamina K o crioprecipitados.
7. Evitar la necrosis en el sitio de la mordedura: • Sepsis: solicitar hemocultivos y adecuar
• Vigilar el edema y la perfusión distal para tratamiento antibiótico manteniendo el es-
diagnosticar tempranamente un síndro- tado general del paciente.
me compartimental. • Alteraciones neurológicas y convulsiones:
• Realizar fasciotomía en caso de síndro- generalmente se deben a hemorragia en
me compartimental y siempre que los el sistema nervioso central; se deben co-
tiempos de coagulación estén ontrolados. rregir los tiempos de coagulación con sue-
• El paciente debe permanecer hospitali- ro antíofidico y si es necesario llevar a dre-
zado después de la aplicación del anti- naje quirúrgico. Existe una condición muy
veneno, en los casos leves de uno a dos infrecuente y es la que se presenta por ino-
días, en los moderados entre tres y cin- culación intravenosa del veneno, ocasio-

1040
CAPÍTULO XX: ACCIDENTE OFÍDICO

nando rápidamente coagulación intravas- MANIFESTACIONES CLÍNICAS


cular diseminada, tromboembolismo pul- Y DIAGNÓSTICO
monar y pérdida del conocimiento con con-
vulsiones, casi siempre letal. Las manifes- Produce alteraciones locales como dolor y
taciones locales de envenenamiento son edema, y sistémicas como alteraciones de la
mínimas en estos casos. coagulación similares a las del accidente
• Trombocitopenia: se presenta hasta en botrópico. También posee neurotoxinas que
30% de los casos, y se corrige espontánea- producen excitación vagal con bradicardia,
mente 3-4 días después de aplicado el hipotensión marcada, diarrea abundante y
antiveneno. dolor abdominal tipo cólico.
• Reacciones adversas al antiveneno: se
observa hasta en 21% de los casos. Apa-
recen generalmente en los primeros 15 mi- TRATAMIENTO
nutos de aplicación del antiveneno,y se
deben manejar como un shock anafiláctico. La dosis de suero antiofídico polivalente es la
• Accedente ofídico en una mujer gestante: misma que en el accidente botrópico severo,
el tratamiento es igual al del resto de los usando entre 6 y 10 ampollas inicialmente. El
pacientes, pero requiere control ecográfico soporte general y el resto de los cuidados son
y obstétrico por el alto riesgo de aborto, similares a los del accidente botrópico. Se
desprendimiento de placenta y/o muerte debe tener especial cuidado con la hidratación
fetal. y los trastornos electrolíticos.
• Enfermedad del suero: se presenta en 30-
50% de los pacientes, a los 5-12 días des-
pués de la aplicación del suero. Se debe ACCIDENTE CROTÁLICO
tratar con esteroides y antihistamínicos.
• Muerte: ocurre en 2-8 % de los casos. Las En Colombia el accidente por serpiente cas-
causas más frecuentes son: shock hemo- cabel suramericana Crotalus durissus terrifi-
rrágico, insuficiencia renal, insuficiencia cus es raramente reportado. Esta serpiente
respiratoria, hemorragia en el sistema ner- habita las regiones semidesérticas y desér-
vioso central y sepsis. ticas, especialmente en el Caribe y los valles
del Río Magdalena. Se alimenta de lagartijas,
pájaros y pequeños mamíferos.
ENVENENAMIENTO LACHÉSICO
Como todas las de su especie tiene un sona-
Muy raro, en nuestro medio, solamente se jero al final de la cola que avisa su presencia
produce por la Lachesis muta, conocida como y con ello evita gran número de accidentes.
berrucosa o rieca. Es el ofidio venenoso más Posee el veneno más letal de todos los ofidios
grande de América, puede medir hasta cua- terrestres colombianos.
tro metros, posee las características de los
Bothrops pero es más pasivo, es ovíparo y
se alimenta de ratones. La dosis letal míni- VENENO
ma de veneno es de 170 mg, pero por su
gran tamaño puede inocular ésta o una ma- Tiene un veneno de efecto neurotóxico com-
yor cantidad. puesto por crotamina y crotaxina, responsa-
bles de la acción miotóxica y de la falla renal

1041
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

por mioglobinuria. Además, la crotaxina produ- • Moderado: Si hay alteraciones locales y


ce bloqueo neuromuscular inhibiendo la ac- palpebrales con ptosis.
ción de la acetilcolina en las terminaciones • Severo: Cuando se presenta además falla
nerviosas. La convulxina ocasiona trombocito- renal, insuficiencia respiratoria, o mioglo-
penia y con la giroxina causan convulsiones. binuria.
El envenenamiento por crótalos produce al-
gunas alteraciones en la coagulación y en la
función hepática. LABORATORIOS
• Parcial de orina para evaluar mioglubinuria,
MANIFESTACIONES CLÍNICAS proteinuria o glucosuria.
• Nitrógeno uréico, creatinina, sodio, potasio
1. Locales: edema que no compromete más y calcio debido a que se alteran por el daño
de dos segmentos y no se extiende al tron- renal que produce el veneno.
co, parestesias, hemorragia local leve o • Creatin-fosfoquinasa para confirmar la
equimosis sin ampollas ni necrosis. rabdomiólisis.
2. Sistémicas: se presentan dos horas des- • Pruebas de coagulación y recuento de
pués del ocurrido el accidente: plaquetas hasta lograr su normalización
• Neurológicas: ptosis palpebral bilateral, (aproximadamente en 2-3 días).
oftalmoplejía, visión borrosa, diplopía,
fascies miasténica, con menor frecuen-
cia disfagia, sialorrea, parálisis de los TRATAMIENTO ESPECÍFICO
músculos de los miembros y parálisis
respiratoria que conlleva a la muerte ge- Suero antiofídico polivalente del Instituto Na-
neralmente en las primeras 12 horas del cional de Salud o suero anticrotálico del Insti-
accidente. tuto Butantan de Brasil, que neutralizan 10 mg
• Renales: generalmente 24 horas des- de veneno crotálico por ampolla. Estos sue-
pués de ocurrido el accidente se presen- ros por ser líquidos deben mantenerse en
ta coluria roja o café, oliguria o anuria. nevera de 2–8oC. Para los accidentes leves a
• Mialgias. moderados deben aplicarse 10 ampollas y
• Trombocitopenia. para los severos 20 ampollas.
• Hemorragia.

ENVENENAMIENTO MICRURICO
DIAGNÓSTICO
Este accidente es ocasionado por las ser-
La evaluación debe ser similar al accidente pientes conocidas como corales o rabo de
botrópico haciendo énfasis en el examen ají, se distribuyen en la zona cafetera y per-
neurológico, especialmente el motor. tenecen a la familia de Elaphidae y géneros
Micrurus y Lepthomicrurus. Tienen una colo-
La gravedad del accidente se clasifica en: ración característica con anillos alternados
blanco, negro, amarillo y rojo. Son protero-
• Leve: Cuando solo hay manifestaciones de glifas, de hábito nocturno y poco agresivo,
envenenamiento local, sin alteraciones ponen huevos y se alimentan de pequeños
hemorrágicas, renales ni neurotoxicidad. reptiles y lagartijas.

1042
CAPÍTULO XX: ACCIDENTE OFÍDICO

Tiene una muy baja incidencia en Colombia, • Moderado: cuando hay parálisis de los
2% de casos. La mayoría de accidentes ocurre músculos de los ojos o cara, disfagia y
en niños quienes atraídos por los colores vis- debilidad de los músculos respiratorios.
tosos las tocan y sufren mordeduras en mano. • Severo: cuando hay parálisis respirato-
ria que requiere ventilación mecánica.

VENENO
TRATAMIENTO
Acción casi exclusiva por una neurotoxina de
bajo peso molecular que le permite difundirse Se debe utilizar suero antiofídico específico
rápidamente en los tejidos. Se une al receptor para Micrurus que se puede conseguir en La-
de acetilcolina de la placa neuromuscular pre- boratorios Probiol 1,3 mgr/10 mL o importar
sináptica y ocasiona parálisis flácida en la víc- del Instituto Clodomiro Picado de Costa Rica,
tima. Este veneno considerado como uno de con capacidad neutralizante de 5 mgr/10 mL
los más letales, puede llevar al accidentado a o del Instituto Butantan del Brasil.
la muerte en pocas horas. En Micrurus fulvius
Se utilizan de 5-10 ampollas como dosis inicial,
la dosis letal calculada para un adulto es de
tanto para casos leves como para los mode-
15 mg.
rados y severos. Si los síntomas persisten, no
se debe dudar en la aplicación de una nueva
dosis de dos ampollas del suero.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
El uso de neostigmina para aumentar los ni-
1. Síntomas locales: escasos o nulos, con veles de acetilcolina en la placa neuromuscu-
parestesias en la herida a los pocos minu- lar, se recomienda en dosis de 0,5 mg IV cada
tos después de la mordedura. 30 minutos hasta 5 dosis, precedidas por la
2. Sistémicos: aparecen dos horas después administración de atropina 0,6 mg en adultos
de la mordedura. Incluyen visión borrosa, y 0,01 mg/Kg en niños.
diplopía, ptosis palpebral, oftalmoplejía, sia-
lorrea, disfagia, voz débil, dolor mandibular,
pérdida del equilibrio, fascies miasténicas, LECTURAS RECOMENDADAS
dificultad para mantenerse de pie, dificultad 1. Dart RC, Seifert SA, Boyer LV, Clark RF, et al. A
para la marcha y disnea. La víctima puede randomized multicenter trial of crotalinae
fallecer entre 8 y 10 horas después de la polyvalent immune Fab (ovine)antivenom for the
mordedura por paro respiratorio. treatment for rotaline snakebite in the United
States. Arch Intern Med 2001; 161:2030-2036.
2. Fan HW, Marcopito LF, Cardoso JL, et al. Se-
quential randomised and double blind trial of pro-
DIAGNÓSTICO methazine prophylaxis against early anaphylactic
reactions to antivenom for bothrops snake bites.
1. Clínico, teniendo en cuenta manifestacio- BMJ. 1999; 318:1451-1452.
nes neurológicas típicas 3. Arguelos A, Vanegas D, Montenegro J, et al. Com-
2. Clasificación del accidente: plicaciones cardiacas en mordeduras de serpien-
tes. Rev Col Cardiol 2002; 9:361-363.
• Leve: cuando no esta comprometida la 4. Otero R. Manual de diagnóstico y tratamiento del
función respiratoria y no tiene ningún accidente ofídico. Editorial Universidad de Antio-
tipo de alteración motora. quia. Medellín, 1994.

1043
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

5. Pineda D, Rengifo JM. Accidentes por animales 7. Scharman EJ, Noffsinger VD. Copperhead snake-
venenosos. Bogotá: División de biblioteca y publi- bites: clinical severity of local effects. Ann Emerg
caciones, Instituto Nacional de Salud, 2002. Med 2001; 38:55-61.
6. Premawardhena AP, de Silva CE, Fonseka MM, 8. Tanen DA, Ruha AM, Graeme KA, Curry SC, et al.
et al. Low dose subcutaneous adrenaline to pre- Rattlesnake envenomations: unusual case presen-
vent acute adverse reactions to antivenom serum tations. Arch Intern Med 2001; 161:474-479.
in people bitten by snakes: randomised, placebo 9. Vélez JH. Serpientes, las especies menos prote-
controlled trial. BMJ 1999; 318:1041-1043. gidas. Hexágono Roche 1994; 3:5-16.

1044
CAPÍTULO XXI: TRASTORNOS POR CALOR

CAPÍTULO XXI

Trastornos por calor

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades de Medicina

EPIDEMIOLOGÍA

D entro del grupo de trastornos por calor


se reúnen cuatro entidades:
de julio de 1995, en Chicago se presentaron
600 muertes por golpe de calor; 70% de las
víctimas eran mayores de 65 años y 90% pa-
• Calambres por calor. decían enfermedades crónicas como hiper-
• Síncope por calor. tensión, diabetes y enfermedad coronaria.
• Agotamiento por calor.
• Golpe de calor. Entre los medicamentos implicados se en-
cuentran las fenotiazinas y los anticolinérgicos,
Cada una representa un punto en el espectro que intefieren con la pérdida de calor.
de gravedad de la enfermedad, con los calam-
bres por calor en el extremo leve y el golpe de
calor como el de mayor amenaza para la vida. FISIOLOGÍA DE LA REGULACIÓN
DE LA TEMPERATURA
Según los Centers for Disease Control and
Prevention de los Estados Unidos, 7.000 per- La regulación de la temperatura es un proce-
sonas murieron debido a trastornos por calor so complejo. Cuenta con tres mecanismos in-
entre 1979 y 1997. La tasa de incidencia en tegrados de funcionamiento:
ese país es de 26,5 casos por 100.000 habi-
tantes. En Arabia Saudita, nación con una gran 1. Termorreceptores, localizados en la piel y
superficie desértica, la incidencia en verano en el núcleo preóptico del hipotálamo.
puede llegar a 250 casos por 100.000 habitan- 2. Efectores termorreguladores, la sudoración
tes. De igual importancia es el hecho de que y la vasodilatación periférica.
los casos de agotamiento por calor pueden 3. Área de control localizada en el cerebro.
ser tres o cuatro veces más frecuentes que
los casos del fatal golpe de calor. El cuerpo humano puede considerarse como
un motor que convierte un combustible, el ali-
Varios factores de riesgo favorecen la apari- mento, en energía. El metabolismo basal con-
ción de trastornos por calor. La edad, las en- sume 50-60 kcal/hr/m2. Si el organismo no
fermedades concomitantes, medicamentos, la contara con un sistema de enfriamiento, la
pobreza y la falta de acceso a cuidado médi- magnitud de la tasa metabólica resultaría en
co son los principales. Durante la ola de calor aumento de un grado centígrado por hora en

1045
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

la temperatura corporal. Los trastornos por al estar de pie y sentarse o acostarse cuando
calor se presentan cuando la producción de aparezcan síntomas como náusea o debilidad.
calor es más rápida que su eliminación.

AGOTAMIENTO POR CALOR


CUADRO CLÍNICO Y TRATAMIENTO
Agotamiento por calor es un síndrome clínico
CALAMBRES POR CALOR caracterizado por depleción de volumen en
personas expuestas a altas temperaturas am-
Los calambres por calor se presentan de ma- bientales. Resulta de una ingesta inadecua-
nera usual en trabajadores o atletas que sudan da o insuficiente de agua y electrolitos. Este
profusamente cuando laboran en un ambiente síndrome puede progresar a golpe por calor
de alta temperatura. Los calambres, que son si no se trata de manera apropiada.
contracciones rápidas, intermitentes y doloro-
sas aparecen cuando el individuo ha termina- Los síntomas incluyen malestar general, ma-
do su actividad y se encuentra descansando. reo, debilidad, náuseas y vómito. En el exa-
Son ocasionados por pérdida de sal. El mane- men físico se encuentra un paciente deshidra-
jo consiste en reposo de los músculos afecta- tado, con taquicardia e hiperventilación: la
dos y la utilización de soluciones salinas por temperatura suele estar dentro de límites nor-
vía oral. Si el paciente no responde a este tra- males: no hay compromiso del sistema nervio-
tamiento, el paso siguiente es utilizar solución so central y no es necesario solicitar exáme-
salina normal por vía intravenosa. nes de laboratorio.

El paciente deber ser colocado en un ambiente


SÍNCOPE POR CALOR frío y se aplica hielo en las axilas y en la ingle
como forma rápida de disminuir la temperatu-
Uno de los mecanismos para perder calor es ra corporal.
la vasodilatación periférica, que resulta en re-
distribución de la sangre a la piel. En individuos
predispuestos, como los ancianos, esta redis- GOLPE DE CALOR
tribución puede disminuir el gasto cardiaco y
la perfusión cerebral dando como resultado Es una verdadera urgencia médica. Se define
síncope. El episodio sincopal da lugar a como una temperatura corporal mayor de 40°C
caídas, que a su vez pueden causar lesiones en presencia de disfunción del sistema nervioso
graves. central. Es una forma de hipertermia que indu-
ce respuesta inflamatoria sistémica que lleva
El tratamiento es colocar al paciente en posi- a disfunción orgánica múltiple, donde la ence-
ción de Trendelenburg, con lo cual la mayoría falopatía es la manifestación predominante.
se recupera. Se debe evaluar el estado de hi-
dratación y hacer las correcciones necesarias. Existen dos formas de golpe de calor. La for-
ma clásica se presenta en condiciones de alta
Las personas predispuestas a padecer sín- temperatura y humedad ambiental. Las vícti-
cope por calor deben recibir información sobre mas usualmente son ancianos que viven en
medidas preventivas, como moverse frecuen- hogares con una ventilación deficiente. No hay
temente, flexionar los músculos de las piernas sudoración en 85% de los pacientes.

1046
CAPÍTULO XXI: TRASTORNOS POR CALOR

La forma asociada con el ejercicio ocurre en peratura del paciente baje a 39°C en los pri-
jóvenes sanos que han realizado ejercicio meros 30 minutos de atención. Tan pronto co-
extenuante en ambientes muy calurosos. Es- mo se alcance esta temperatura, es recomen-
tán predispuestos a desarrollar rabdomiolisis dable interrumpir las medidas de enfriamien-
y falla renal aguda. to por el riesgo de producir hipotermia de
rebote.
La aparición súbita de piel caliente, enrojeci-
da y seca, con una temperatura corporal ma- Los antipiréticos están contraindicados.
yor de 40°C, taquicardia, confusión, convul-
siones o coma en una persona expuesta a un
ambiente cálido constituye el cuadro clínico PRONÓSTICO
clásico del golpe de calor. En la evaluación
del paciente se deben solicitar exámenes de Los calambres por calor, el síncope por calor
laboratorio que incluyan hemograma, electróli- y el agotamiento por calor no constituyen una
tos séricos, pruebas de coagulación, perfil he- amenaza para la vida del paciente. Por el con-
pático, amilasemia y pruebas de función re- trario, el golpe por calor tiene una mortalidad
nal. La utilidad de estas pruebas reside en su de 20% en el primer mes del evento. Veinte
capacidad para detectar en forma temprana por ciento de los pacientes sufren incapaci-
cualquier signo de disfunción orgánica. dad neurológica permanente.

El manejo del golpe de calor incluye una fase


prehospitalaria y una fase hospitalaria. LECTURAS RECOMENDADAS

El paciente debe ser desvestido y la piel debe 1. Dematte J, O´Mara K, Buesher J, et al. Near fatal
mantenerse húmeda con agua tibia. En el ser- heat stroke during the 1995 heat wave in Chicago.
vicio de urgencias la prioridad es enfriar al in- Ann Inter Med 1998; 129:173-181,
2. Knochel P, Bouchma A. Heat Stroke. N Engl J Med
dividuo, para lo cual se han utilizado diferen-
2002; 346:1978-1988.
tes métodos, todos ellos motivo de controver- 3. Yarborugh B, Vicario S. Heat illness. En: Rosen´s
sia. Uno de las más utilizados consiste en su- Emergency Medicine. Concepts and Clinical
mergir al paciente en agua helada. Cualquier Practice. Editado por J Marx, R Hockberger. Fifth
medida que se utilice debe llevar a que la tem- edition. Mosby. St Louis, 2002.

1047
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXII

Hipotermia

Edgar Celis, MD, FCCM


Departamento de Anestesiología y
Jefe, Unidad de Cuidado Intensivo Quirúrgico
Fundación Santa Fe de Bogotá
Presidente, Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado intensivo

Luz Angela Arellano, MD


Residente de Cirugía General,
Universidad Javeriana.

INTRODUCCIÓN

L as causas de hipotermia son múltiples. El


conocimiento de los efectos fisiológicos de
la hipotermia es esencial para el buen mane-
La hipotermia se ha clasificado en escalas de
severidad de acuerdo con los cambios fisioló-
gicos que ocurren en la medida que descien-
jo de los pacientes hipotérmicos. La historia de la temperatura:
clínica, la determinación de factores predispo-
nentes y los hallazgos en el examen físico son Hipotermia leve: 35ºC a 32ºC. Hay cambios car-
los elementos clave para establecer el diag- diovasculares leves, como vasoconstricción,
nóstico. taquicardia, aumento en la presión sanguínea,
todos orientados a mantener la temperatura
corporal. Otros cambios son de tipo neuroló-
gico: disartria, amnesia, alteración del juicio y
DEFINICIÓN ataxia. Todos estos cambios son reversibles
En humanos, la hipotermia se define como con medidas básicas de recalentamiento.
temperatura central menor de 35°C. Hipotermia moderada: 32ºC a 28ºC. Se pre-
sentan cambios en la conducción cardiaca.
La hipotermia accidental primaria, ocurre
cuando una persona sana es expuesta a con- Hipotermia severa: 28ºC a 20ºC. La produc-
diciones ambientales de frío extremo, como ción de calor y los mecanismos de conserva-
inmersión en agua helada. ción térmica comienzan a fallar.
Hipotermia profunda: 20ºC a 14ºC. Los pacien-
La hipotermia accidental secundaria, es debi- tes se encuentran en asistolia.
da a enfermedad o inducida por cambios en
la termorregulación y producción de calor Hipotermia extrema: menos de 14ºC. Es in-
(hipotiroidismo, intoxicación por drogas y compatible con la vida, excepto cuando es
trauma). inducida y controlada terapéuticamente.

1048
CAPÍTULO XXII: HIPOTERMIA

FISIOPATOLOGÍA La hipotermia inhibe la liberación de insulina


por el páncreas, aunque en la hipotermia leve
La hipotermia produce arritmias y trastornos se conservan los niveles normales de gluce-
de conducción en el miocardio. Las más fre- mia, por el aumento en la utilización de la glu-
cuentes son bradiarritmias, bloqueo auriculo- cosa durante el temblor. A temperaturas me-
ventricular, prolongación y alteración de PR, nores de 32ºC cesa el temblor y disminuye la
QRS y QT. También se presentan anormali- utilización periférica de glucosa, lo cual se tra-
dades en la repolarización con cambios en el duce en hiperglicemia.
segmento ST y en la onda T. La onda J, u
Osborn, que es una deflexión en la unión del El desequilibrio de líquidos y electrolitos es
complejo QRS con el segmento ST, ocurre en común en pacientes con hipotermia modera-
80% de los casos, sin que se la pueda consi- da y severa. Inicialmente hay vasoconstricción
derar como un hallazgo patognomónico, por periférica con desviación del flujo hacia los
cuanto ocasionalmente se encuentra en pa- órganos centrales y la región esplácnica, lo
cientes normales. cual incrementa de manera rápida la perfu-
sión renal, que junto con la disminución en la
El corazón frío es muy irritable y exhibe au- filtración glomerular y la reducción en los ni-
mento en la susceptibilidad para la fibrilación veles de hormona antidiurética produce au-
auricular o ventricular. A temperaturas meno- mento inicial en el volumen urinario, efecto
res de 25°C ocurre asistolia. denominado “diuresis fría”.

La hipoventilación, la supresión del reflejo de El resultado final es disminución en el volumen


la tos y del reflejo mucociliar predisponen al sanguíneo total, hemoconcentración, disminu-
desarrollo de atelectasias y neumonía. Junto ción en el gasto cardiaco y disminución eventual
con la desviación a la izquierda de la curva de en la tasa de filtración glomerular. La necrosis
disociación de la hemoglobina, son los facto- tubular aguda puede desarrollarse por un esta-
res predisponentes de hipoxemia, hipoperfu- do crítico de hipoperfusión. Las concentracio-
sión e hipoxia tisular. nes séricas de electrolitos son impredecibles.

El temblor desaparece a menos de 35°C, con Además de hemoconcentración, hay aumen-


disminución en la tasa de metabolismo basal. to en la viscosidad sanguínea, leucopenia y
Por cada grado centígrado que disminuye la coagulopatía.
temperatura, el consumo de oxígeno baja en
5%-15%. Hay preservación del equilibrio áci- La trombocitopenia se debe a supresión de la
do-base en las hipotermias leves y modera- medula-ósea y a secuestro esplénico. La fun-
das, pero en la hipotermia severa el metabo- ción plaquetaria también se ve afectada por
lismo se convierte en anaerobio, con acumu- disminución del tromboxano B2. La hipoter-
lación intracelular de lactato y acidosis mia inhibe las vías intrínseca y extrínseca de
metabólica. la coagulación. Debido a la estandarización
de las pruebas de coagulación que se reali-
La función gastrointestinal también se afecta. zan rutinariamente a una temperatura de 37ºC,
En pacientes con hipotermia moderada y se- hay subestimación en su cálculo. El sangra-
vera, se presenta íleo adinámico y disminu- do difuso no quirúrgico se correlaciona con
ción del metabolismo hepático. los tiempos prolongados de coagulación y la
disfunción plaquetaria.

1049
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La disfunción en el sistema inmune resulta, gicas son fatiga, incoordinación muscular, con-
en buena parte, del secuestro esplénico de fusión, alucinaciones, letargia y estupor.
leucocitos y de la disminución en la función
de los neutrófilos. Exámenes de laboratorio
Estudios diagnósticos, se requieren únicamen-
La hipotermia puede incrementar la suscepti- te para evaluar enfermedades asociadas y pa-
bilidad de los pacientes a infección en la he- ra la monitorización de la disfunción orgánica.
rida quirúrgica por vasoconstricción periférica
y alteración en la inmunidad. La vasoconstric- Debido a los cambios sistémicos causados por
ción reduce la presión parcial de oxígeno en la hipotermia, en algunos pacientes, principal-
los tejidos. Hay una disminución en la muerte mente aquellos con hipotermia moderada a
microbiana, debido a que la producción de ra- grave, se realiza un estudio básico que inclu-
dicales de oxígeno es dependiente de la ten- ya hemograma, tiempos de coagulación, elec-
sión del oxígeno tisular. La hipotermia leve trolitos séricos, nitrógeno ureico en sangre
puede alterar mecanismos de la respuesta (BUN), creatinina sérica y glucemia.
inmune como la quimiotaxis, la fagocitosis por
los granulocitos, la motilidad de los macrófa- Los estudios complementarios son para ayu-
gos y la producción de anticuerpos. dar a establecer la disfunción orgánica que cau-
sa compromiso vital. Se debe hacer segui-
En casos de hipotermia grave, la continuidad miento del estado ventilatorio y del equilibrio
de la combinación de hipovolemia, depresión ácido-base mediante determinación de gases
miocárdica e hipoxemia que interfieren con la arteriales, ya que estos se modifican de acuer-
perfusión de los órganos, lleva a alteraciones do con la temperatura: por cada grado centí-
neurológicas severas, acidosis metabólica, grado menos, la PaO2 desciende 7,2%, la
compromiso respiratorio grave, daño mio- PaCO2 desciende 4,4% y el pH aumenta 0,015.
cárdico y muerte.
Los cambios miocárdicos secundarios a tem-
peraturas menores de 32ºC ameritan segui-
DIAGNÓSTICO miento electrocardiográfico para detectar arrit-
mias y/o trastornos en la conducción.
El diagnóstico de hipotermia primaria o hipo-
termia relacionada con trauma o quemadura La radiografía de tórax esta indicada cuando
se establece exclusivamente mediante la his- hay signos de compromiso respiratorio y en
toria clínica y el examen físico. pacientes con hipotermia moderada a severa
con alto riesgo de broncoaspiración, atelecta-
Signos y síntomas sias o neumonía.

El estrés producido por temperaturas bajas


estimula el sistema nervioso simpático, lo que DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
produce taquicardia, vasoconstricción perifé- DE HIPOTERMIA
rica y temblor.
Aumento en la pérdida de calor
El flujo sanguíneo cerebral desciende 6% por
cada grado centígrado que baja la tempera- • Hipotermia primaria. Es debida a exposi-
tura corporal. Las manifestaciones neuroló- ción e inmersión. La hipotermia ocurre des-

1050
CAPÍTULO XXII: HIPOTERMIA

pués de exposición prolongada, no nece- sorden tiroideo, antes de la confirmación me-


sariamente a bajas temperaturas ambien- diante métodos diagnósticos paraclínicos.
tales. La temperatura corporal baja rápida-
mente durante la inmersión en agua, don- La administración de tiroxina es una medida
de la pérdida de calor por conducción pue- salvadora en este grupo de pacientes de alto
de ser 30 veces más rápida que en el aire. riesgo. Debido a la reducción en los procesos
El abuso de sustancias, representa un fac- metabólicos basales, la hipotermia leve pue-
tor coadyuvante en la hipotermia primaria de ser vista en pacientes hipotiroideos sin
y puede ser una causa secundaria de hipo- antecedente de coma mixedematoso.
termia en ausencia de exposición. La admi-
nistración de sustancias pueden perjudicar Alteración en la termorregulación
los mecanismos homeostáticos. La hipo-
termia se asocia con alcohol, barbitúricos, • Trauma. La hipotermia es más común y
narcóticos, sedantes, hipnóticos, agentes más profunda en pacientes con lesiones
hipoglicemiantes, litio, clonidina y agentes severas, por lo cual es difícil determinar si
anestésicos. Estas sustancias incrementan el aumento de la mortalidad se debe atri-
la pérdida de calor por vasodilatación buir a la hipotermia o a las lesiones asocia-
periférica e inhibición de la termogénesis. das. Se ha propuesto que la hipotermia tie-
Las intoxicaciones disminuyen la capaci- ne un efecto protector en los pacientes con
dad de sensibilidad al frío y, por lo tanto, trauma y que, por lo tanto, las tasas de mor-
alteran la protección voluntaria para pre- talidad no serían más altas en pacientes
venir la pérdida de calor. hipotérmicos si los factores asociados fue-
ran iguales. En el estudio de Steinemann y
• Iatrogenia. Muchos casos de hipotermia colaboradores en pacientes hospitalizados
iatrogénica, resultan de la falta de medidas con hipotermia, la tasa de mortalidad fue
para prevenir la pérdida de calor en pacien- de 63%. Ninguno con temperatura corpo-
tes de riesgo. La exposición al frío en la sa- ral normal murió. Cuando la severidad de
la de cirugía, especialmente cuando se las lesiones fue categorizada usando una
abren grandes cavidades, lleva a hipoter- combinación de factores anatómicos y fi-
mia, generalmente inadvertida, en el pacien- siológicos (metodología TRISS), los pa-
te quirúrgico. La reanimación de pacientes cientes hipotérmicos no tuvieron una tasa
hipovolémicos con líquidos endovenosos o de mortalidad mayor. La hipotermia se aso-
con productos sanguíneos fríos da como re- ció con resultados adversos en una revi-
sultado enfriamiento rápido e hipotermia. sión enfocada en la más baja temperatura
registrada y estatificada, no sólo de acuer-
Disminución en la producción de calor do con el índice de severidad de trauma
(ISS), sino también con los requerimientos
El coma mixedematoso, es una manifestación de sangre y cristaloides y la presencia o
rara de hipotiroidismo que representa la pér- ausencia de shock. Los pacientes hipotér-
dida casi total de la función tiroidea. Las ma- micos tuvieron una mortalidad más alta,
nifestaciones iniciales del coma mixedemato- que los que presentaban lesiones semejan-
so incluyen obnubilación, hipotermia y bradi- tes con temperatura conservada. La mor-
cardia. La tasa de mortalidad es de 50%-75%. talidad fue de 100%, si la temperatura des-
La decisión de tratamiento se basa en la his- cendía debajo de 32ºC, aun en pacientes
toria clínica y en los signos sugestivos del de- con lesiones leves.

1051
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Encefalopatía de Wernicke. Resulta de una ción de cristales de hielo intracelulares con


deficiencia crítica de tiamina, importante oclusión microvascular y anoxia. Algún
para el metabolismo de los carbohidratos, daño al tejido también puede resultar de la
como fuente de energía para el sistema lesión por reperfusión que ocurre durante
nervioso central. La hipotermia, aunque ra- el recalentamiento. Según la profundidad
ra, es un signo importante del síndrome de involucrada se gradúa en:
Wernicke, probablemente por lesiones del • Primer grado: hiperemia, edema sin
hipotálamo posterior. La muerte ocurre en necrosis cutánea
15%-20% de los pacientes con encefalo- • Segundo grado: formación de vesículas,
patía de Wernicke, usualmente por falla he- hiperemia y edema con necrosis cutá-
pática. nea de espesor parcial.
• Tercer grado: necrosis cutánea de es-
Otras condiciones clínicas pesor completo, generalmente con he-
morragia y formación de vesículas.
La hipotermia puede ser un indicador de res- • Cuarto grado: necrosis cutánea de es-
puesta inflamatoria sistémica (SIRS), cuando pesor completo, incluyendo músculo y
se asocia con taquicardia, taquipnea o leucoci- hueso, con gangrena.
tosis. La taquicardia y la taquipnea pueden no El tratamiento inicial es aplicable a todos
ser indicadores de SIRS en la hipotermia leve, los grados de lesión. La clasificación ini-
porque son también parte de la respuesta cial no tiene carácter pronóstico.
normal hiperdinámica al frío.
2. Lesión sin congelación. Es debida al daño
Se ha propuesto que la hipotermia se desa- endotelial microvascular, estasis y oclusión
rrolla en 78% de los pacientes ancianos con vasculares. El pie o la mano de “inmersión
sepsis. La hipotermia observada en la sepsis en frío”, describe una lesión sin congela-
resulta de la alteración de la neurotransmisión miento de los pies o manos, típica de solda-
periférica o central, o de la atenuación del sis- dos, marineros o pescadores, resultante de
tema de las citokinas. la exposición crónica a condiciones am-
bientales húmedas con temperaturas ape-
nas arriba del punto de congelación, por
TIPOS DE LESIONES ejemplo, 1,6ºC a 10ºC. Aunque el pie com-
POR EXPOSICIÓN AL FRÍO pleto se vea negro, no hay destrucción tisu-
lar profunda.
La severidad de las lesiones por exposición
al frío depende de la temperatura, duración
de la exposición, condiciones ambientales y TRATAMIENTO
estado general del paciente. Las temperatu-
ras bajas, la inmovilización, la exposición pro- El tratamiento de la hipotermia consiste en una
longada, la humedad, la presencia de enfer- monitorización rigurosa, manejo en una uni-
medad vascular periférica y las heridas abier- dad de cuidado intensivo, recalentamiento y
tas, son factores que aumentan la severidad corrección de los trastornos ácido-base y de
de la lesión. las complicaciones.

1. Lesión por congelación. Es debida al Es vital la monitorización cuidadosa de los sig-


congelamiento de los tejidos y a la forma- nos vitales, del ritmo cardíaco, de los gases

1052
CAPÍTULO XXII: HIPOTERMIA

arteriales y de la presión venosa central. Se tamiento activo externo y según la respuesta,


administra oxígeno humidificado. La intuba- se avanza a recalentamiento central.
ción traqueal está indicada en pacientes en
estado de coma y en pacientes con insuficien- Hipotermia con inestabilidad cardiovascu-
cia respiratoria. Debe ser realizada en forma lar: en hipotermia moderada a severa con
cuidadosa por una persona experta, a fin de arresto cardiovascular, el mejor método es el
evitar la aparición de fibrilación ventricular. bypass cardiopulmonar. Con esta técnica se
mantienen la perfusión y la oxigenación, con
Los métodos de recalentamiento dependen de rápido recalentamiento y recuperación de las
la gravedad de la hipotermia y de los recur- funciones miocárdicas. Se puede lograr con
sos disponibles: un bypass femoro-femoral o con un bypass
estándar aorta-aurícula derecha.
1. Recalentamiento pasivo: ambiente ca-
liente, cobijas calientes. El bypass cardiopulmonar está contraindica-
2. Recalentamiento externo activo: inmer- do en pacientes con temperaturas mayores
sión en agua caliente, cobijas eléctricas, de 32ºC, con niveles de potasio de 10 mmol
calentadores ambientales. por litro y con lesiones traumáticas severas
3. Recalentamiento central activo: irrigación asociadas.
gástrica o colónica con soluciones cristaloi-
des calientes, calentamiento por inhalación
mediante intubación y administración de LECTURAS RECOMENDADAS
oxígeno caliente y húmedo, infusión de
1. American College of Surgeons. ATLS, Programa
soluciones intravenosas calientes, calen- Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi-
tamiento por radioondas y calentamiento cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole-
por intercambiador de calor externo. gio Americano de Cirujanos. Chicago, 1997.
2. Bernard SA, Gray TW, Buist MD, et al. Treatment
Se deben precalentar los líquidos intravenosos of comatose survivors of out-of-hospital cardiac
a 39°C-40ºC. La administración de hormona arrest with induced hypothermia. N Engl J Med
tiroidea se reserva para aquellos pacientes 2002; 346:557-563.
con fuerte sospecha de hipotiroidismo. No 3. Biem J, Koehncke N, Classen D, Dosman J. Out
of the cold: management of hypothermia and
están indicados los corticoides ni los antibió-
frostbite. CMAJ 2003; 168:305-311.
ticos de carácter profiláctico. 4. Gentinello LM. Advances in the management of
hypothermia. Surg Clin North Am 1995; 75:246-
Se procede con el recalentamiento en forma 256.
continua y escalonada, puesto que es peli- 5. Harris OA, Colford JM Jr, Good MC, Matz PG. The
groso hacerlo súbitamente debido a la ten- role of hypothermia in the management of severe
dencia que tienen los pacientes hipotérmicos brain injury: a meta-analysis. Arch Neurol 2002;
a desarrollar arritmias cardíacas. Se reco- 59:1077-1083.
6. Haskell, Robin M, Boruta, B, Frankel H. Hypother-
mienda basarse en el estado clínico de cada
mia. Anesthesiology 1997; 8: 368-381.
paciente. 7. Jurkovich GJ, Greiser WB, Luterman A. Hypother-
mia in trauma victims: an ominous predictor of
Hipotermia con estabilidad cardiovascular: survival. J Trauma1987; 27:1019-1024.
se prefiere recalentamiento pasivo en los pa- 8. Kurtz, A, Sessler DI, Lenhardt R. Perioperative
cientes con hipotermia leve. Cuando la hipo- normothermia to reduce the incidende of surgical
termia es moderada, se puede iniciar recalen- wound infection and shorten hospitalization. Study

1053
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

of wound infection and temperature group. N Engl 11. Sánchez C. Hipotermia. En: Guías para Manejo
J Med 1996; 34:1209-1215. de Urgencias. Ministerio de Salud y FEPAFEM.
9. Lazar HL. The treatment of hypothermia. N Engl J Bogotá, 1996.
Med 1997;337:1545-1547. 12. Sessler DI. Complications and treatment of mild
10. Mattu A, Brady WJ, Perron AD. Electrocar- hypothemia. Anesthesiology 2001; 95: 531-543.
diographic manifestations of hypothermia. Am J 13. Steinmann S, Shackford SR, Davis JW. Implica-
Emerg Med 2002; 20:314-326. tions of admission hypothermia in trauma patients.
J Trauma 1990; 30:200-202.

1054
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

CAPÍTULO I

Endocarditis bacteriana

Enrique Montoya, MD
Sección de Cardiología,
Fundación Santa Fe de Bogotá

Mónica Amador, MD
Residente de Cardiología,
Universidad El Bosque
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

S e define como una infección bacteriana,


en forma de vegetación, de la superficie
endocárdica, que requiere rápida identificación
hay un mayor riesgo de enfermedad degene-
rativa valvular, de cambios valvulares proté-
sicos y aumento de la exposición a bacterie-
y tratamiento efectivo. La vegetación está con- mias nosocomiales.
formada por una colección de plaquetas,
fibrina, células inflamatorias y microorganis- La edad media de aparición ha cambiado de
mos. Generalmente afecta a las válvulas car- 30-40 años en la era preantibiótica, a 47-69
diacas, pero también puede instaurarse en años recientemente. Debido al incremento en
defectos septales o en las cuerdas tendinosas. el uso de sustancias ilícitas, la tendencia es
hacia el aumento en la población más joven.
La incidencia actual en este grupo es de 150-
EPIDEMIOLOGÍA Y FACTORES 200 por 100.000 personas/año. En Colombia
PREDISPONENTES no se dispone de estudios epidemiológicos
que permitan establecer la prevalencia de esta
Las características epidemiológicas de la en- entidad en las diferentes regiones del país.
docarditis han cambiado en los países desa-
rrollados como producto del aumento de la Otras condiciones asociadas con el aumento
longevidad, la aparición de nuevos factores en la endocarditis son: mala higiene dental,
predisponentes y el aumento en los casos hemodiálisis, diabetes mellitus e infección por
nosocomiales. VIH. El prolapso mitral es la valvulopatía que
con más frecuencia se relaciona con endo-
En los Estados Unidos y en Europa occiden- carditis, con una incidencia de 100 por 100.000
tal, la incidencia de endocarditis adquirida en pacientes-año, siendo mayor el riesgo en la
comunidad en válvulas nativas es de 1,7 a 6,2 población mayor de 45 años. En los países
casos por 100.000 personas/año. Se presen- en desarrollo, la fiebre reumática continúa
ta con mayor frecuencia en hombres, con una siendo la condición que con más frecuencia
relación de 1,7:1. Al aumentar la longevidad se relaciona con endocarditis bacteriana.

1057
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La endocarditis infecciosa en prótesis valvula- fecciosa en válvulas nativas, y es la cau-


res constituye el 7-25% de los casos de en- sa más común de endocarditis nosoco-
docarditis en los países desarrollados. mial. Los estafilococos son los factores
etiológicos más importantes asociados
con uso de drogas ilícitas intravenosas.
MICROBIOLOGÍA Complicaciones como abscesos miocár-
dicos, abscesos del anillo valvular y peri-
Los patógenos más comúnmente relacionados carditis supurativa son más frecuentes en
con endocarditis son estreptococos, Strepto- la endocarditis por S. ureus. El S. epider-
coccus sanguis, Strep. bovis, Strep. mutans y midis es el causante principal de endocar-
Strep. mitis. En los pacientes ancianos, el Strep. ditis en prótesis valvulares.
bovis es el germen predominante, especial-
mente relacionado con lesiones colónicas C. Bacilos Gram negativos: Enterobacterias
preexistentes. Los enterococos se relacionan como E. coli, Serratia marcescens, Klebsie-
con más frecuencia con bacteremias lla sp, Proteus sp., son causantes hasta del
nosocomiales y con endocarditis resistentes. 5% de los casos de endocarditis infeccio-
sa en válvulas nativas. Los bacilos Gram
A. Estreptococos: Son los microorganismos negativos del grupo HACEK (Haemophilus
causantes más frecuentes. Ocasionan en- sp, Actinobacilius actinomycetemcomitans,
tre el 30% y el 65% de los casos de endo- Cardiobacterium hominis, Eikenella rodens
carditis infecciosa de las válvulas nativas y Kingella sp ) son habitantes normales de
e incluye las especies de estreptococos alfa la parte superior del aparato respiratorio y
hemolíticos, enterococos, estreptococos la bucofaringe, e infectan válvulas
nutricionalmente variantes, Streptococcus cardiacas anormales, ocasionando endo-
pneumoniae, estreptococos del grupo D y carditis infecciosa subaguda y endocardi-
Streptococcus piogens, incluyendo grupos tis en válvulas protésicas en un año, o in-
A, B, C y G. clusive al poco tiempo luego de la cirugía.
Este grupo de bacterias es responsable del
B. Estafilococos: El S. aureus es causal en 57% de los casos de endocarditis por ba-
el 30% de los casos de endocarditis in- cilos Gram negativos.

TABLA 1. CAUSAS DE ENDOCARDITIS INFECCIOSA EN VÁLVULAS NATIVAS Y PROTÉSICAS


Tomado de Cardiology Clinics Diagnosis and managment of infective endocarditis 1996; 14: 352.
Endocarditis válvula nativa Endocarditis temprana Endocarditis tardía
válvula mecánica válvula mecánica
Microorganismo
Estreptococo 50 10 30
• Viridans 35 0 25
• Bovis 15 0 5
Enterococo 10 0 5
Estafilococo 25 50 40
• S. aureus 23 15 10
• Coagulasa negativo 2 35 30
Difteroides 10 05
Bacilos gram negativos 6 15 10
Hongos 1 10 5
Otros y cultivos negativos 8 5 5

1058
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

FISIOPATOLOGÍA En los pacientes con endocarditis infecciosa


se estimula la inmunidad humoral y celular.
Si el endotelio está íntegro, es resistente a la Los complejos inmunitarios se fijan al com-
infección; sin embargo, si se produce alguna plemento, depositándose a lo largo de la mem-
lesión en el endotelio valvular, se estimula la brana basal glomerular y ocasionando glome-
hemostasis y el depósito de plaquetas y fibri- rulonefritis. Las manifestaciones reumatológi-
na. Este complejo resultante es más suscep- cas y algunas manifestaciones periféricas,
tible a la colonización bacteriana y se deno- como los nódulos de Osler, también parecen
mina endocarditis trombótica no bacteriana. deberse al depósito local de complejos
inmunes.
Una vez entra determinado microorganismo
a la circulación proveniente de una infección
localizada o trauma, se adhiere, persiste y se MANIFESTACIONES CLÍNICAS
propaga a través del endotelio lesionado. Los
fragmentos de vegetación forman émbolos. La presentación clínica de la endocarditis in-
fecciosa generalmente incluye manifestacio-
El cuadro clínico es el resultado de: nes extracardiacas o hallazgos asociados con
1. Los efectos destructivos locales de la in- la extensión intracardiaca de la infección. El
fección intracardiaca. intervalo que transcurre entre la bacteremia y
2. La embolia de fragmentos blandos o la aparición de los síntomas es corto. Se cal-
sépticos. cula que 80% de los pacientes desarrolla sín-
3. La diseminación hematógena. tomas en 2 semanas.
4. La respuesta inmunológica, con lesión sub-
secuente por el depósito de complejos antí- La fiebre es el síntoma y el signo más común;
geno-anticuerpo o la interacción de anti- sin embargo, puede estar ausente en pacien-
cuerpos y complemento con los antígenos tes con falla cardiaca, insuficiencia cardiaca,
depositados en los tejidos. pacientes con uso previo de antibióticos, o por
la presencia de endocarditis infecciosa por
La distorsión o perforación de las válvulas, la gérmenes menos virulentos.
ruptura de las cuerdas tendinosas y las perfo-
raciones o fístulas entre los vasos principales Entre el 80-85% de los pacientes con endo-
y las cavidades cardiacas ocasionan insufi- carditis infecciosa de la válvula nativa mues-
ciencia cardiaca aguda. La infección, sobre- tran soplo cardiaco; sin embargo, cuando la
todo de la válvula aórtica o de las prótesis endocarditis involucra a la válvula tricúspide
valvulares, puede provocar abscesos y fiebre pueden no auscultarse soplos. De igual ma-
persistente, cambios en el sistema de conduc- nera, en la infección por S. aureus, en sólo
ción, alteraciones electrocardiográficas, 30-45% de los casos pueden auscultarse so-
arritmias y pericarditis purulenta. Las vegeta- plos en la evaluación clínica inicial.
ciones grandes pueden ocasionar estenosis
valvular y deterioro hemodinámico. Las vege- Anteriormente se afirmaba que cerca de 50%
taciones grandes, de más de 10 mm, y las de los pacientes presentaba manifestaciones
hipermóviles, embolizan con mayor frecuen- periféricas clásicas. De éstas, las petequias
cia. La bacteremia persistente con o sin em- son las más comunes. Otra característica son
bolismo séptico origina infección metastásica. las hemorragias subungueales en astilla y los
nódulos de Osler; las lesiones de Janeway son

1059
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

manchas pequeñas eritematosas o hemorrá- B. Complicaciones cardiacas: En la endo-


gicas maculares, no dolorosas, que aparecen carditis infecciosa de las válvulas nativas,
en las palmas de las manos y en las plantas la falla cardiaca sucede más frecuentemen-
de los pies y son consecuencia de embolias te en las infecciones de la válvula aórtica
sépticas. Las manchas de Roth son hemorra- (29%) que en las de la válvula mitral (20%).
gias retinianas ovaladas.
C. Absceso esplénico: es una complicación
Entre el 30% y el 40% de los pacientes pue- poco frecuente. Se desarrolla por dos me-
den presentar manifestaciones neurológicas, canismos: siembra bacterémica de un in-
principalmente cuando la causa es el S. ureus. farto blando (oclusión de la arteria espléni-
La manifestación neurológica más común es ca por embolismo de una vegetación), o
la embolia. En 5% de los pacientes se obser- siembra directa por un émbolo infectado.
va hemorragia intracerebral como consecuen- Aunque el infarto esplénico se puede pre-
cia de la ruptura de un aneurisma micótico, sentar hasta en 40% de las endocarditis del
de una arteria por arteritis séptica o como con- lado izquierdo del corazón, sólo el 5% de
secuencia de sangrado en un infarto cerebral. los pacientes desarrolla absceso esplénico.
También puede encontrarse encefalitis con
microabscesos por S. aureus. Cerca de 44% D. Aneurisma micótico: ocurre en 15-25%
de los pacientes pueden presentar artralgias, de los casos de endocarditis infecciosa. Re-
artritis, dolor lumbar y mialgias. Entre 5% y sulta del embolismo séptico de las vegeta-
10% de los pacientes aquejan dolor lumbar. ciones a los vasa vasorum arteriales o al
La presencia de esplenomegalia es un hallaz- espacio intraluminal, con difusión de la in-
go en 25-60% de los pacientes. fección a través de la íntima del vaso y de
la pared. En 50% de los casos, la etiología
es endocarditis infecciosa por estreptococo
COMPLICACIONES y en 10% por S. aureus. Los aneurismas
micóticos extracraneales son con frecuen-
A. Embolismo sistémico: es de ocurrencia cia asintomáticos y de localización intrato-
común en 22-50% de los casos. Con fre- rácica o intraabdominal.
cuencia se localiza en los lechos arteriales
mayores, incluyendo pulmones, arterias E. Enfermedad renal: el embolismo renal y
coronarias, bazo, intestino y extremidades. el infarto son las dos complicaciones más
Hasta en 65% comprometen el sistema frecuentes, y ocurren en dos tercios de los
nervioso central y más de 90% de estos casos. Producen intenso dolor abdominal
émbolos se localizan en el territorio de la en el flanco. En el uroanálisis puede ob-
arteria cerebral media. El infarto esplénico servarse hematuria macro o microscópica,
de origen embólico puede producir dolor cilindros hemáticos, leucocitos y albuminu-
en cuadrante superior izquierdo del abdo- ria. La enfermedad glomerular es un hallaz-
men. El embolismo renal puede ocasionar go común, con una incidencia de 28-68%.
dolor en el flanco y hematuria franca o mi-
croscópica. El embolismo arterial coronario, F. Complicaciones neurológicas: se han re-
hallazgo frecuente en las necropsias, rara portado en 20-40% de los casos, con una
vez resulta en un infarto transmural. El mortalidad de 21-58%. El S. aureus es el
embolismo de las extremidades puede oca- microorganismo que con más frecuencia
sionar dolor e isquemia. produce secuelas neurológicas.

1060
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

DIAGNÓSTICO Los modernos criterios diagnósticos de la Uni-


versidad de Duke combinan parámetros im-
Se debe sospechar endocarditis en pacientes portantes contenidos en los antiguos crite-
con manifestaciones periféricas: bacteremia, rios de Beth Israel, con los hallazgos ecocar-
fungemia, evidencia de valvulitis activa, embo- diográficos y su sensibilidad diagnóstica llega
lismo periférico y fenómenos inmunológicos. hasta el 74%.

TABLA 2. DEFINICIÓN DE TÉRMINOS USADOS EN LOS CRITERIOS DE DUKE PARA EL DIAGNÓSTICO DE ENDOCARDITIS

CRITERIOS
MAYORES
A. MICROBIOLÓGICOS
1. HEMOCULTIVOS POSITIVOS PARA ENDOCARDITIS
- Microorganismos típicos aislados en 2 hemocultivos tomados en punciones de sitios diferentes:
• Strep. bovis, grupo HACEK, Strep. Viridans
• Bacteremias adquiridas en comunidad por Staph. Aureus o Enterococos.
- Hemocultivos persistentemente positivos, lo que se define como la obtención de un microorganismo que concuer-
da con endocarditis infecciosa a partir de:
• Más de 2 hemocultivos positivos tomados con 12 hrs de diferencia.
• Tres hemocultivos positivos o más de 4 hemocultivos separados (con la primera y última muestras separadas
en más de 1 hora).

- Un hemocultivo positivo para Coxiella burneii o títulos positivos para Coxiella burneii >1:800.
2. EVIDENCIA DE DAÑO ENDOCÁRDICO
A. ECOCARDIOGRAMA POSITIVO
El ecocardiograma transesofágico es recomendado en pacientes con válvula protésica, en quienes se sospecha
endocarditis infecciosa por clínica o quienes presentan endocarditis complicada.
Tres hallazgos ecocardiográficos son conclusivos de endocarditis:
• Tumoración intracardiaca oscilante, discreta, ecogénica, en la válvula o en los tejidos de sostén.
• Absceso perianular
• Deshiscencia parcial reciente de una prótesis valvular.
B. Insuficiencia valvular de reciente aparición (no es suficiente con que aumente o cambie un soplo ya existente).

CRITERIOS MENORES
- Predisposición para endocarditis infecciosa, lo cual incluye ciertas cardiopatías y el uso de sustancias intravenosas.
Las anormalidades relacionadas con la aparición de endocarditis se clasifican en 3 grupos:
Alto riesgo: endocarditis infecciosa previa, enfermedad valvular aórtica, Enfermedad reumática cardiaca, prótesis valvular,
coartación de la aorta y cardiopatías congénitas cianosantes.
Riesgo moderado: prolapso mitral con regurgitación valvular, estenosis mitral, enfermedad valvular tricuspídea, estenosis
pulmonar y cardiomiopatía hipertrófica.
Bajo o ningún riesgo: ostium secundum, enfermedad coronaria, revascularización miocárdica previa y prolapso mitral con
valvas delgadas en ausencia de regurgitación.
Fiebre: temperatura mayor de 38°C.
Fenómenos vasculares: embolias arteriales, infartos pulmonares sépticos, aneurisma micótico, hemorragia intracraneal,
hemorragias conjuntivales y lesiones de Janeway.
Fenómenos inmunológicos: glomerulonefritis, nódulos de Osler, manchas de Roth y factor reumatoideo positivo.
Evidencia microbiológica: hemocultivo positivo sin cumplir los criterios mayores señalados anteriormente, o evidencia
serológica de infección activa con un microorganismo que concuerda con endocarditis infecciosa.
Ecocardiograma: consistente con endocarditis pero que no cumple con los criterios mayores descritos.

1061
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Los criterios de Duke estratifican a los pacien-


tes en tres categorías:

TABLA 3. CRITERIOS CLÍNICOS DE DUKE PARA EL DIAGNÓSTICO DE ENDOCARDITIS

ENDOCARDITIS DEFINITIVA
Criterios patológicos: microorganismos demostrados en los cultivos o patología en las vegetaciones. Microorganismos
demostrados en las vegetaciones que han embolizado o en un absceso intracardiaco, o lesiones patológicas (vegetaciones
o abscesos intracardiacos) presentes confirmadas por histología con endocarditis activa.Criterios Clínicos: (usando la
definición de términos de los criterios) 2 criterios mayores ó 1 criterio mayor y tres menores ó 5 criterios menores

ENDOCARDITIS PROBABLE
Si cumple con un criterio mayor y un criterio menor, o tres criterios menores.

ENDOCARDITIS RECHAZADA
Cuando hay un diagnóstico alternativo más probable, o hay resolución de los hallazgos que sugerían endocarditis luego de
menos de 4 días de antibióticos o cuando no hay evidencia patológica de endocarditis en la cirugía o en autopsia.

HALLAZGOS DE LABORATORIO ECOCARDIOGRAMA


70-90% de los pacientes presentan anemia La sensibilidad del ecocardiograma transto-
en el cuadro hemático, con un índice normo- rácico para detectar vegetaciones en la vál-
crómico normocítico. En la endocarditis sub- vula varía entre 38-90%, usando la cirugía
aguda suele no haber leucocitosis, pero en la como patrón oro.
aguda por lo general sí con neutrofilia
importante. Es raro encontrar trombocitopenia. El ecocardiograma transesofágico tiene ma-
La VSG se incrementa hasta 55 mm/h en casi yor sensibilidad, sobre todo en estructuras
todos los pacientes. Otras pruebas que de- posteriores como la válvula mitral, para la cual
muestran el compromiso inmunitario son: com- se reporta 82-100% en diferentes series. La
plejos inmunitarios circulantes, factor reuma- especificidad global oscila entre 91-98%.
toideo, crioglobulinas y proteína C-reactiva.

Toma de hemocultivos: los hemocultivos cons- TRATAMIENTO


tituyen un criterio mayor para el diagnóstico
definitivo de endocarditis. Se debe realizar un La base del tratamiento médico es el uso de
mínimo de 2 tomas (por 2 venopunciones se- antibióticos parenterales contra el microorga-
paradas, cada muestra dividida en 2 botellas) nismo específico. La resolución de la fiebre
para cada hemocultivo ordenado. Una canti- con la terapia efectiva contra el germen apro-
dad de 8-10 ml de sangre en cada botella ma- piado varía entre 3 y 7 días, y la persistencia
ximiza la posibilidad de resultados positivos. de fiebre sugiere la formación de un absceso
intracardiaco o a distancia. Entre 10-20% de
los pacientes con endocarditis demostradas

1062
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

por cirugía o autopsia tienen hemocultivos ca, se prefiere esperar los resultados inicia-
negativos; las causas son múltiples: la prin- les de los hemocultivos. Si los tres hemoculti-
cipal es el inicio de terapia empírica antes de vos son negativos luego de 24-48 horas, se
tomar hemocultivos. Otras menos frecuentes deben obtener 2 ó 3 hemocultivos adiciona-
son la presencia de organismos del grupo les antes de iniciar la terapia empírica. El ini-
HACEK, endocarditis por hongos, por gérme- cio de oxacilina combinada con gentamicina
nes intracelulares como Bartonella sp, Chla- no es suficiente para cubrir adecuadamente
mydia sp, Coxiella burnetti. los enterococos, pero sí al añadir penicilina G
mientras se esperan los cultivos. Si lo que se
Terapia antibiótica empírica: si el paciente requiere es manejo antibiótico empírico para
no se halla en estado agudo o en falla cardia- endocarditis en una válvula protésica, se debe
iniciar vancomicina, rifampicina y gentamicina.

TABLA 4. RÉGIMEN EMPÍRICO PARA EL TRATAMIENTO DE ENDOCARDITIS CON CULTIVOS NEGATIVOS

SITUACIÓN CLÍNICA ANTIBIÓTICO PRIMERA ELECCIÓN RÉGIMEN ALTERNATIVO


Inicio agudo en válvula nativa Penicilina G (20 millones U divididas en 4 vancomicina (15 mg/kg cada 12 hrs
dosis) o ampicilina (2 g IV cada 4 hrs) + IV) + gentamicina (1mg/kg cada 8
gentamicina (1 mg/k IV o IM cada 8 hrs). hrs. IV o IM)
+oxacilina (2 g IV cada 4 hrs)
Inicio agudo en válvula protésica vancomicina (15mg/kg cada 12 hrs IV) Igual a la terapia de elección. Se
+ gentamicina (1mg/kg IV cada 8 hrs) debe consultar para cirugía urgen-
+ rifampicina (600 mg VO día) te y se debe siempre valorar para
signos de falla cardiaca.

TABLA 5. TERAPIA ANTIMICROBIANA USUAL PARA EL MANEJO DE ENDOCARDITIS INFECCIOSA


EN VÁLVULAS NATIVAS Y PROTÉSICAS

PATÓGENO VÁLVULA NATIVA VÁLVULA PROTÉSICA


S. viridans susceptible a la peni- Penicilina G o ceftriaxona durante 4 semanas Penicilina G por 6 semanas y
cilina, S. bovis, y otros estrepto- Gentamicina por 2 semanas
cocos con CIM de PNC
< 0,1 mcg/ml
Estreptococos relativamente resis- Penicilina G durante 4 semanas y gentamicina Penicilina G durante 6 semanas
tentes a la penicilina (CIM >0.1 y por 2 semanas y gentamicina por 4 semanas
< 0.5 mcg/ml)
Streptococcus sp. con CIM >0.5 Penicilina G ( o ampicilina) y gentamicina durante Penicilina G ( o ampicilina) y
mcg/ml, Enterococcus, Abiotro- 4-6 semanas gentamicina por 6 semanas
phia sp.
Estafilococo meticilino sensible Nafcilina u oxacilina durante 4-6 semanas, con o Nafcilina u oxacilina con
sin la adición de gentamicina durante los 3 a 5 rifampicina durante 6 semanas
primeros días de tratamiento y gentamicina por 2 semanas
Estafilococo meticilino resistente Vancomicina por 4 a 6 semanas con o sin la adi- Vancomicina con rifampicina
ción de gentamicina durante los 3 a 5 primeros por 6 semanas y gentamicina
días de tratamiento por 2 semanas
Endocarditis del corazón derecho Nafcilina u oxacilina con gentamicina por 2 semanas
Grupo HACEK Ceftriaxona durante 4 semanas Ceftriaxona por 6 semanas

1063
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 6. RÉGIMEN DE ANTIBIÓTICOS EN ENDOCARDITIS DE VÁLVULA NATIVA POR ESTREPTOCOCO VIRIDANS Y


BOVIS (MIC < 0,1 mg/ml)

ANTIBIÓTICO DOSIS Y VÍA DURACIÓN


ESQUEMA 1
• Penicilina G o 12 -18 millones U día IV continuos o cada 4 hrs 4 semanas
• Ceftriaxona 2 g IV día 4 semanas

ESQUEMA 2
• Penicilina G 12-18 millones U IV continuos o dosis igual cada 4 hrs 2 semanas
+
• Gentamicina 1 mg/k IM o IV cada 8 hrs. 2 semanas

ALERGIA A PENICILINA
• Vancomicina 30 mg/kg/día dividido 2 dosis hasta 2 g día máximo
dosis total. Mantener nivel sérico pico 30-45 mg/ml

TABLA 7. RÉGIMEN DE MANEJO PARA ENDOCARDITIS INFECCIOSA EN VÁLVULA NATIVA POR ESTREPTOCOCO
CON MIC DE >0,1 A <0,5 mg/ml.

ANTIBIÓTICO DOSIS DURACIÓN


Penicilina G 18 millones u/ día IV continuo o cada 4 hrs. 4 semanas
+
Gentamicina 1 mg/kg cada 8 hrs IV 2 semanas

ALERGIA A PENICILINA:
Vancomicina 30 mg/kg/día IV dividido en 2 dosis 4 semanas

TABLA 8. RÉGIMEN PARA MANEJO DE ENDOCARDITIS INFECCIOSA EN VÁLVULA NATIVA PRODUCIDA POR
ESTREPCTOCOS CON MIC > 1 mG/ml

ANTIBIÓTICO DOSIS DURACIÓN


Penicilina G 18-30 millones U IV cada 24 hrs continuo o cada 4 hrs. 4-6 semanas
+
Gentamicina 1-1,5 mg/kg cada 8 hrs IV 4 – 6 semanas
o
Ampicilina 2 g IV cada 4 hrs 4-6 semanas
+
Gentamicina igual dosis 4-6 semanas

MIC: Concentración inhibitoria mínima

1064
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

TABLA 9. RÉGIMEN DE MANEJO DE ENDOCARDITIS INFECCIOSA EN VALVULA NATIVA POR ENTEROCOCOS


MICROORGANISMO ANTIBIÓTICO DOSIS DURACIÓN
Enterococo altamente r Penicilina G 18 a 30 millones U IV/conti- 8 a 12 semanas
esistente a aminogluco- o nuo por 24 hrs o cada 4 hrs
sidos Ampicilina 2 g IV cada 4 hrs 8 a 12 semanas
Enterococo resistente a Ampicilina-sulbactam 3 g cada 6 hrs IV 4 a 6 semanas
penicilina + Gentamicina 1-1,5 mg/kg cada 8 hrs IV o IM 4 a 6 semanas
alternativo:Amp/SB
+ Vamcomicina 3 g IV cada 6 hrs 4-6 semanas
30mg/k/dia IV x 2 dosis
Enterococo con resistencia Vancomicina 30mg/k/dia dividido 2 dosis
intrínseca a penicilina/ am- + 4 – 6 semanas
picilina Gentamicina 1.-1.5mg/k cada 8 hrs
Enterococo resistente a Linezolid 600 mg 2x/día IV o PO
vancomicina Synercid

TABLA 10. RÉGIMEN ANTIBIÓTICO RECOMENDADO PARA EL MANEJO DE ENDOCARDITIS INFECCIOSA


PRODUCIDA POR ESTAFILOCOCOS
MICROORGANISMO ANTIBIÓTICO DOSIS DURACIÓN
Estafilococoaureus Oxacilina 2 gr IV cada 4 hrs. 4-6 semanas
meticilino sensible +
Gentamicina 1mg/k cada 8 hrs por 2 semanas 3 a 5 primeros días
Alternativas:
• Cefazolina 2 g IV cada 8 hrs. 4-6 semanas
+
• Gentamicina 1 mg/kg IV cada 8 hrs. 3-5 días
• Vancomicina 30 mg/k/dia dividida en 2 dosis IV 4-6 semanas
Estafilococo aureus Vancomicina 30 mg/kg/día dividida en 2 dosis IV 4-6 semanas
meticilino resitente

TABLA 11. RÉGIMEN ANTIBIÓTICO PARA ENDOCARDITIS INFECCIOSA DE VÁLVULA PROTÉSICA

MICROORGANISMO ANTIBIÓTICO DOSIS DURACIÓN


Staph. epidermidis Vancomicina 15 mg/k/día dividido en 2 dosis IV 6 semanas
+
Rifampicina 300 mg VO cada 8 hrs 6 semanas
+
Gentamicina 1 mg/kg cada 8 hrs IV 14 días

Staph. meticilino sensible Nafcilina 2 g IV cada 4 hrs 6 semanas


+
Rifampicina 300 mg VO cada 8 hrs 6 semanas
+
Gentamicina 1 mg/kg IV cada 8 hrs 14 días

1065
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MICROORGANISMO ANTIBIÓTICO DOSIS DURACIÓN


Staph. meticilino resistente Vancomicina 1 g cada 12 hrs IV 6 semanas
+
Rifampicina 300 mg VO cada 8 hrs 6 semanas
+
Gentamicina 1 mg/k/ cada 8 hrs IV 14 días
HACEK Ceftriaxona 2gr IV día 4 semanas
o
Ampicilina 2 g IV cada 4 hrs 4 semanas
+
Gentamicina 1 mg/kg cada 8 hrs IV 4 semanas
Pseudomona aeruginosa Piperacilina 3-4 g IV cada 4 hrs
o
Ceftazidime 2 g IV cada 8 hrs
o
Ciprofloxacina 400 mg IV cada 12 hrs
Imipenem 0,5-1 g IV cada 6 hrs
+
Tobramicina 1,7 mg/kg IV cada 8 hrs
Aspergillus Anfotericina B 1 mg/kg/día IV Cambio valvular más tera-
+ pia antimicótica
5 fluorocitocinacon
o sin Rifampicina
Candida Anfotericina B 0,5 mg/kg/día IV

TRATAMIENTO QUIRÚRGICO PROFILAXIS


El tratamiento quirúrgico se debe realizar pre- La evidencia que existe acerca de si la bacte-
feriblemente después del control de la infec- remia inducida por procedimientos médicos u
ción y la estabilización hemodinámica. Nunca odontológicos causa endocarditis, está basa-
se debe retrasar la cirugía en los casos de da en reportes de casos no controlados. Las
falla cardiaca o shock cardiogénico en un pa- guías más recientes publicadas por la Ame-
ciente con posibilidades de reparación. Se re- rican Heart Association para el manejo de pro-
comienda también la cirugía temprana en los filaxis son las siguientes:
casos de abscesos anulares o aórticos cuan-
do la infección es resistente a la terapia
antimicrobiana.

1066
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

TABLA 12. PROFILAXIS PARA ENDOCARDITIS: RECOMENDACIONES DE ACUERDO


A LA PATOLOGÍA CARDIACA SUBYACENTE

PROFILAXIS RECOMENDADA PROFILAXIS NO RECOMENDADA


ALTO RIESGO - CIA de tipo ostium secundum.
- Válvula protésica, incluye bioprótesis y homoinjertos. - Corrección quirúrgica de CIA, CIV o ductus permeable
- Endocarditis infecciosa previa. sin cortocircuito residual de más de 6 meses.
- Cardiopatía congénita cianótica compleja: tetralogía de - Soplo funcional o inocente.
Fallot transposición de grandes vasos, ventrículo único. - Fiebre reumática sin disfunción valvular.
- Shunt sistémico-pulmonar construido en cirugía. - Prolapso mitral sin insuficiencia.
- Enfermedad de Kawasaki sin disfunción valvular.
RIESGO MODERADO - Marcapaso cardiaco y/o cardiodesfibrilador implantable.
- CIV, ductus permeable, CIA tipo ostium primum, coarta-
ción aórtica, válvula aórtica bivalva.
- Enfermedad valvular adquirida (cardiopatía reumática).
- Cardiomiopatía hipertrófica.
- Prolapso mitral con insuficiencia y/o engrosamiento de
las valvas.

CIV: Comunicación interventricular CIA: Comunicación interauricular

TABLA 13. RECOMENDACIONES DE PROFILAXIS PARA ENDOCARDITIS DE ACUERDO A PROCEDIMIENTOS VARIOS

PROFILAXIS RECOMENDADA PROFILAXIS NO RECOMENDADA


• Procedimientos dentarios u otros en pacientes con • Intubación orotraqueal
riesgo alto o moderado de a cuerdo a la patología • Timpanostomía
cardiaca subyacente: • Cesárea
- Extracciones dentales. • Cateterización uretral
- Curetaje periodontal. • Legrado uterino
- Implante dentario y reimplante de dientes avulsionados. • Broncoscopio con broncoscopio flexible.
- Procedimientos endodónticos de conductos. • Cateterismo cardiaco
- Implante de bandas ortodónticas pero no bracket. • Angioplastia
• Broncoscopio con broncoscopio rígido. • Implante de marcapaso o desfibrilador
• Adenoidectomía y amigdalectomía. • Colocación de stent
• Dilatación esofágica. • Circuncisión
• CPRE con obstrucción biliar • Biopsia de piel
• Cirugía del tracto biliar·
• Prostatectomía
• Cistoscopia
• Dilatación uretral
CPRE: Colangiopancreatografía reetrogada endoscópica

1067
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 14. PROFILAXIS ESTÁNDAR PARA TRATAMIENTOS ODONTOLÓGICOS,


RESPIRATORIOS O PROCEDIMIENTOS ESOFÁGICOS

SITUACION AGENTE REGIMEN


Estándar Amoxacilina 2 g 1 hr antes del procedimiento.
No puede ingerir medicamentos Ampicilina 2 g IV 30 min antes del procedimiento.
Alergia a penicilina Clindamicina 600 mg PO 1 hr antes del procedimien-
o to. 2 g por 1 hr antes del procedimien-
Cefalexina to. 500 mg PO 1 hr antes.
o
Azitromicina
Alergia a penicilina y no puede Clindamicina 600 mg IV 30 min antes.
ingerir medicamentos o
Cefazolina 1 g IV antes del procedimiento.

TABLA 15. PROFILAXIS PARA PROCEDIMIENTOS GENITOURINARIOS O GASTROINTESTINALES

SITUACIÓN ANTIBIÓTICO DOSIS


Pacientes de alto riesgo Ampicilina 2 g IM o IV 30 min antes y 1 g IV
+ 6 hrs después.
Gentamicina 1,5 mg/kg IV 30 min antes del procedi-
miento.
Pacientes de alto riesgo Vancomicina 1 g IV 1-2 hrs antes del procedimien-
Alérgicos a la amoxacilina + to.1,5 mg/kg IV 30 min antes del proce-
o Ampicilina Gentamicina dimiento.
Pacientes de riesgo Amoxacilina 2 g orales 1 hr antes.
Moderado o
Ampicilina 2 g IV o IM antes del procedimiento.
Pacientes de riesgo Vancomicina 1 gr IV 1-2 hrs antes, terminar infusión
Moderado alergicos 30 min antes del procedimiento.
a amoxacilina o ampicilina

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Braunwald E, Zipes P, Libby D. Heart Disease. 4. Gillinov AM, Faber CN, Sabik JF, et al. Endocardi-
6th edition, Saunders WB Co. Philadelphia, 2001. tis after mitral valve repair.Ann Thorac Surg 2002;
2. Ebnother C, Altwegg M, Gottschalk J, et al. En- 73:1813-1816.
5. Greaves K, Mou D, Patel A, Celermajer DS. Clinical
docarditis after urinary tract infection. Infection
criteria and the appropriate use of transthoracic
2002; 30:212. echocardiography for the exclusion of infective en-
3. Fernandez-Guerrero ML, Herrero L, Bellver M, et docarditis. Heart 2003; 89:273-275.
al. Nosocomial enterococcal endocarditis: a 6. Harris GD, Steimle J. Compiling the identifying
serious hazard for hospitalized patients with features of bacterial endocarditis. Vague clues may
enterococcal bacteraemia. J Intern Med 2002; point to this dangerous infection. Postgrad Med
252:510-515. 2000; 107:79-83.

1068
CAPÍTULO I: ENDOCARDITIS BACTERIANA

7. Hoen B, Alla F, Selton-Suty C, et al. Diagnostic surgical intervention in infective endocarditis. Infect
methods current best practices and guidelines for Dis Clin North Am 2002; 16:453-475.
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infective endocarditis. Infect Dis Clin North Am recommendations to patients for use of antibiotic
2002; 16:377-392. prophylaxis to prevent endocarditis. JAMA 2000;
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profile of infective endocarditis: results of a 1-year 15. Sexton DJ, Spelman D. Current best practices and
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clinical course and prognosis. Crit Care 2002; 16. Towns ML, Reller LB. Diagnostic methods current
6:149-154. best practices and guidelines for isolation of bac-
10. Lamas CC, Eykyn SJ. Blood culture negative en- teria and fungi in infective endocarditis. Infect Dis
docarditis: analysis of 63 cases presenting over Clin North Am 2002; 16:363-376.
25 years. Heart 2003; 89:258-262. 17. Vilacosta I, Graupner C, San Roman JA, et al. Risk
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management of bacterial endocarditis in 2003. for infective endocarditis. J Am Coll Cardiol 2002;
Curr Opin Cardiol 2003; 18:106-110. 39:1489-1495.
12. Mylonakis E. Infective endocarditis in adults. 18. Le T, Bayer AS. Combination antibiotic therapy for
Review Article. N Engl J Med 2001; 18:1318-1330. infective endocarditis. Clin Infect Dis 2003; 36:615-
13. Netzer RO, Altwegg SC, Zollinger E, et al. Current 621.
best practices and guidelines indications for

1069
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO II

Infección del sitio operatorio

Gustavo A. Quintero, MD, MSc, FACS, FRCS


Servicio de Microbiología Quirúrgica,
Departamento de Cirugía.
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a infección del sitio operatorio (ISO) es la


infección nosocomial más frecuente en los
hospitales del mundo, con tasas variables de
b. Drenaje espontáneo proveniente de la he-
rida.
c. Signos locales de infección (superficial) o
acuerdo a las características propias de cada evidencia radiológica de ésta (profunda).
institución. d. Presencia de un absceso durante el acto
quirúrgico, posterior a la cirugía primaria.
La tasa de ISO en los hospitales de los Esta- e. Diagnóstico de infección dedinido por el
dos Unidos oscila entre el 3 y el 5%, pero pue- cirujano.
de variar notablemente según el tipo de hospi-
tal (principalmente si es un Centro de Trauma). La presencia de un cultivo positivo o negativo
En nuestra institución analizadas 33.444 he- no es criterio para confirmar o descartar la pre-
ridas quirúrgicas seguidas por el Programa de sencia de infección. Sin embargo, si se realiza
Vigilancia y Control del Sitio Operatorio du- un cultivo cuantitativo en el que se evidencien
rante los últimos diez años (1991-2001): la más de 100.000 colonias bacterianas por gra-
tasa promedio de ISO es 3.8%. mo de tejido, se confirma el diagnóstico de ISO.
Cualquier valor por debajo de esta cifra podría
A pesar de los importantes adelantos en el ser considerado como contaminación y enton-
campo de la infección quirúrgica, así como en ces priman los criterios clínicos ya expuestos.
el conocimiento del proceso de cicatrización, Es importante tener en cuenta que las reaccio-
la ISO continúa siendo un problema que impli- nes secundarias a la presencia de puntos de
ca altos costos sociales y económicos. sutura no son consideradas como ISO.

La ISO se puede clasificar en tres tipos se- La ISO es una entidad que, aparte de tener
gún su localización: infección incisional su- una prevalencia importante, se acompaña de
perficial, que constituye entre el 60-80% de una morbi-mortalidad no despreciable; su tra-
las infecciones de las heridas; infección inci- tamiento tiene costos elevados y sirve como
sional profunda e infección de órgano o es- indicador de calidad de los servicios quirúrgi-
pacio del sitio quirúrgico. Se presenta gene- cos. Por esta razón se plantea la necesidad
ralmente entre el día 5 - 10 del post-operatorio de tener programas de seguimiento y control
y se define así: de la ISO.

a. Presencia de secreción purulenta en la Existen factores de riesgo ampliamente cono-


herida. cidos que sirven para predecir la posibilidad

1070
CAPÍTULO II: INFECCIÓN DEL SITIO OPERATORIO

de que una herida quirúrgica se infecte. El sis- El conocimiento del proceso de cicatrización
tema más utilizado a nivel mundial es el que permite entender que en realidad existen tres
tiene en cuenta el grado de contaminación de factores fundamentales que determinan la po-
la herida quirúrgica. Según este sistema, las sibilidad de que una herida quirúrgica se in-
heridas se clasifican en: fecte:

a. Herida limpia: son heridas quirúrgicas no a. Recuento de colonias bacterianas en la


infectadas, en las que no se encuentra nin- herida.
gún tipo de reacción inflamatoria y en las b. Estado de la herida al terminar la cirugía.
que el tracto respiratorio, genital, gastroin- c. Estado general del paciente.
testinal o urinario no son penetrados.
b. Herida limpia-contaminada: son heridas Por ello el sistema de clasificación que usa el
en las que el tracto respiratorio, genital, tipo de herida como único factor de riesgo no
gastrointestinal o urinario son penetrados es del todo acertado, puesto que sólo toma
bajo condiciones controladas sin existir una en cuenta una de las tres categorías.
contaminación inusual. Se asume que no
existe evidencia de infección ni una viola- Los Centros para el Control de Enfermeda-
ción mayor a la técnica quirúrgica normal. des (CDC, Atlanta) realizaron el proyecto
c. Herida contaminada: incluyen las heridas “Study of Efficacy of Nosocomial Infection
abiertas, frescas y accidentales. Adicional- Control” (SENIC) y elaboraron un índice que
mente las producidas en intervenciones tuvo en cuenta cuatro factores importantes en
quirúrgicas en las que se rompe la técnica el desarrollo de la ISO. Dicho sistema mostró
quirúrgica o hay severa contaminación de ser dos veces mejor que la clasificación que
líquidos del tracto gastrointestinal o en las usa el tipo de heridas.
que se encuentran procesos inflamatorios
no purulentos. Los cuatro factores que tuvo en cuenta el
d. Herida sucia o infectada: incluyen todas SENIC son:
las heridas traumáticas con tejido desvitali-
zado y aquellas en las cuales hay infec- 1. Cirugía abdominal.
ción o perforación de víscera hueca. La de- 2. Cirugía >2 horas.
finición presupone que los gérmenes cau- 3. Cirugía contaminada o sucia.
sales de la infección postoperatoria esta- 4. Tres o más diagnósticos post-operatorios.
ban presentes en el campo operatorio an-
tes del procedimiento. La presencia de alguno de estos criterios da
un puntaje de 1 y su ausencia un puntaje de
Múltiples estudios han utilizado este sistema 0. Así, al sumar los cuatro diferentes puntajes,
de clasificación y se ha encontrado que entre se obtuvieron diferentes tasas de infección
más contaminada la herida, mayor probabili- según el puntaje total:
dad de que se infecte. Las tasas de infección
son las siguientes: • 0 puntos: 1% de infección.
• 1 punto: 3,6% de infección.
Herida limpia: 1-5% • 2 puntos: 9% de infección.
Herida limpia-contaminada: 3-11% • 3 puntos: 17% de infección.
Herida contaminada: 10-40% • 4 puntos: 27% de infección.

1071
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Otro estudio, también realizado por los CDC, En cuanto a las medidas que se deben tomar
titulado “National Nosocomial Infection Survei- para la prevención, éstas deben involucrar
llance” (NNIS), evaluó tres criterios pronósti- básicamente las tres categorías mencionadas
cos en un sistema bastante parecido al del anteriormente que influyen sobre la infección
SENIC: clasificación ASA 3, 4 ó 5 (estado del de la herida (recuento de colonias, estado de
paciente), cirugía con herida contaminada la herida, estado del paciente).
(grado de contaminación) y cirugía mayor de
dos horas. Los criterios tomados en cuenta a. Disminución del recuento de colonias:
se basan en las tres categorías, ya mencio- el número de colonias bacterianas es uno
nadas, que influyen en el desarrollo de infec- de los factores predisponentes más impor-
ción de herida quirúrgica, al igual que con el tantes en el desarrollo de la ISO. Existen
SENIC. Para el NNIS cada punto positivo al dos medios principales para evitar que lle-
sumarse con los demás da un porcentaje po- guen al área quirúrgica bacterias del me-
sible de infección de la herida: dio ambiente y bacterias propias de la flo-
ra del paciente:
• 0 puntos: 1% de infección. 1. Para controlar las bacterias del medio
• 1 punto: 3% de infección. ambiente se debe procurar una estan-
• 2 puntos: 7% de infección. cia hospitalaria preoperatoria lo más cor-
• 3 puntos: 15% de infección. ta posible; se deben tener medidas es-
trictas de asepsia y antisepsia en la sala
Claramente los sistemas SENIC y NNIS son de cirugía, en el cirujano (lavado de ma-
bastante similares y con resultados estadísti- nos, guantes, batas, tapabocas) y en el
cos significativos. Aunque dichas clasificacio- paciente (lavado del área quirúrgica y
nes mostraron tener un valor estadístico ma- depilación).
yor que las que emplean el tipo de herida como 2. En cuanto al control de la flora propia
criterio único, no todos los hospitales las utili- del paciente, se debe evitar por comple-
zan, lo que dificulta un poco la comparación to realizar cirugía electiva si el paciente
de resultados. presenta infección concomitante en al-
gún otro órgano o región del cuerpo.
Múltiples estudios han comprobado que un
buen programa de prevención de la ISO dis- Una vez el paciente es llevado a salas de ciru-
minuye los costos de hospitalización de ma- gía, en el caso de cirugía limpia o limpia conta-
nera significativa. minada, se debe aplicar un antibiótico profi-
láctico 30 min. antes de la incisión (general-
Un estudio realizado por nosotros en 1998 mente durante la inducción anestésica). Su indi-
mostró que el costo de todas las medidas de cación en cirugía limpia se restringe a: pacien-
prevención básicas utilizadas (lavado del área te inmunocomprometido, cuando se va a colo-
quirúrgica, lavado de manos del cirujano, car una prótesis, el área quirúrgica tiene un
guantes, antibióticos profilácticos) era de recuento bacteriano mayor al normal (ingle y
27.658 pesos/herida, mientras que el trata- axila), o cuando la ISO se presenta como un
miento de la ISO (únicamente local, sin tener problema mayor en el paciente con dicha pa-
en cuenta antibióticos en caso de necesitarlos) tología. La selección del antibiótico debe ha-
alcanzaba valores hasta de 235.000 pesos en cerse de forma inteligente, teniendo en cuenta
sólo curaciones, es decir 10 veces más la flora a cubrir, la duración del procedimiento
costoso. y los efectos adversos para el paciente.

1072
CAPÍTULO II: INFECCIÓN DEL SITIO OPERATORIO

Al terminar la cirugía se debe colocar un apó- quier otra herida, el riesgo de infección está
sito cobertor sobre la herida el cual será reti- claramente por encima del 50 % y lo más pro-
rado de 24-48 horas después del procedimien- bable es que se infecten. Sin embargo, si se
to, momento en el cual los bordes de la heri- dejan abiertas, el grado de contaminación (uno
da se encuentran sellados y no hay posibili- de los factores más importantes) va a poder
dad de colonización bacteriana proveniente ser controlado en los primeros 3-4 días, tiem-
del medio externo. po después del cual se puede hacer una cie-
rre primario tardío, logrando evitar la infección
b. Estado de la herida al final de la cirugía: y obteniendo resultados estéticos y funciona-
este es un punto bastante importante y va les mucho más satisfactorios.
a depender casi exclusivamente de la téc-
nica quirúrgica utilizada. El objetivo primor- Como se puede apreciar, de los sistemas que
dial es que, al finalizar la cirugía, la herida miden los factores de riesgo (tipo de herida,
tenga un adecuado aporte de O2 en los te- SENIC y NNIS), ninguno tiene en cuenta el
jidos. Esto se logra conservando un tejido estado final de la herida, que es muy depen-
vivo y bien vascularizado, sin la utilización diente del cirujano y va a variar permanente-
exagerada del cauterio para evitar la pre- mente.
sencia de tejido necrótico, pues éste favo-
rece la colonización bacteriana. También c. Estado general del paciente: existe una
se debe evitar en lo posible cualquier tipo gran variedad de factores sistémicos que
de cuerpo extraño que aumente la respues- pueden aumentar el riesgo de infección. En
ta inflamatoria y predisponga a la infección; general es importante poder identificar los
por esta razón, se deben escoger las que pueden ser modificados para así lle-
suturas adecuadas para cada tipo de teji- var al paciente a cirugía con el menor nú-
do según el fin que se busque. Los hema- mero de factores positivos. Se deben evi-
tomas también dificultan la cicatrización, tar infecciones concomitantes y mantener
pues aumentan el espacio muerto y son un control adecuado de la glicemia en pa-
medio de cultivo para las bacterias. cientes diabéticos. La nutrición del pacien-
te debe ser valorada de manera pre-opera-
Una de las herramientas importantes que se toria, pues si se encuentra afectada va a
pueden utilizar para disminuir la tasa de in- demorar el proceso de cicatrización aumen-
fecciones en heridas contaminadas es el tipo tando el riesgo de infección. Finalmente,
de cicatrización que se induzca. Estas, como el estado hemodinámico, respiratorio y
se vió anteriormente, tienen hasta un 40% de hematológico (hematocrito) debe ser valo-
riesgo de infección; es decir, casi una de cada rado para así asegurar un buen aporte de
dos heridas contaminadas se puede infectar. O2 al tejido que va a cicatrizar.
Si a este criterio (grado de contaminación) le
sumamos otros, como la edad del paciente y La infección incisional superficial constituye
su estado general, la duración de la cirugía, entre el 60%-80% de las ISO. Su tratamiento
la localización de la misma (abdominal o nó), se basa en la apertura de la herida, el drenaje
la posibilidad de que la herida se infecte pue- adecuado del material purulento y las cura-
de ir aumentando ostensiblemente. Es en es- ciones continuas hasta que la herida empie-
tos casos cuando la cicatrización por segun- ce un adecuado proceso de cicatrización (por
da intención juega un papel fundamental. Si segunda intención). Son pocas las veces en
dicho tipo de heridas se cerraran como cual- las que la infección a este nivel se manifiesta

1073
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

como celulitis y más raro aún que se mani- Si por el contrario, el paciente evoluciona de
fieste como fascitis necrotizante. Sin embar- manera satisfactoria en el postoperatorio, se
go, es importante conocer y estar al tanto de autorizará su egreso de la institución con re-
dichas complicaciones, pues por su mayor comendaciones generales y con un instructi-
morbilididad requieren de identificación pron- vo que informe los signos de infección que
ta y de tratamiento más complejo, que va a puedan alertarlo. Con ello se busca que el pa-
incluir antibioticoterapia endovenosa en la ciente lleve a cabo una auto-evaluación y así
mayoría de los casos. se identifiquen a tiempo los posibles casos de
infección. En caso de presentarse, se citará a
control para tomar muestra de la secreción
PROGRAMA DE VIGILANCIA Y para cultivo y antibiograma y se instaurará el
CONTROL DEL SITIO OPERATORIO manejo subsiguiente. Este período de vigilan-
cia tácita se ha fijado en 30 días.
La infección de la herida quirúrgica es un ex-
celente indicador de calidad de las diferentes Si el paciente no notifica infección dentro de
instituciones hospitalarias. dicho período, el comité realizará seguimien-
to telefónico para asegurar la ausencia de in-
Nuestro programa de vigilancia está alimen- fección, cerrando el caso.
tado por los pacientes postoperatorios, excep-
tuando los procedimientos endoscópicos, ra- Si en el control telefónico se descubre infec-
diológicos intervencionistas y de gineco-obs- ción, el comité determinará el germen causan-
tetricia, identificados previamente por medio te por medio del laboratorio. Se instaurará
de un formato, el cual cuantifica el riesgo de tratamiento en conjunto con el médico tratan-
infección según la clasificación de herida qui- te y una vez cumplido todo este proceso, se
rúrgica, la clasificación ASA, el tiempo quirúr- informará del caso.
gico, administración de antibiótico profiláctico
y factores de riesgo estipulados en los pun- Una parte fundamental del programa de vigi-
tajes SENIC y NNIS, adicionados reciente- lancia es la participación dinámica de sus
mente. miembros, particularmente en la verificación
y aplicación de los protocolos. Específicamen-
Una vez ingresado al programa, y como parte te, se valora la microbiología de la infección
de la primera visita, el comité integrado por la de la herida y sus sensibilidades y anualmente
enfermera jefe y el médico, observa y exami- se realizan modificaciones al protocolo de anti-
na al paciente para conocer su condición bási- bióticos profilácticos según estos resultados.
ca, vigilando su evolución intrahospitalaria,
apoyado por el resto del equipo médico y de
enfermería, con el objeto de diagnosticar LECTURAS RECOMENDADAS
precozmente los casos infectados.
1. Anaya DA, Quintero GA, García-Herreros LG, et
Si se sospecha ISO, se realizará toma de al. Epidemiología de las heridas de tratamiento
muestras para cultivo y antibiograma, dando hospitalario en Colombia. Rev Col Cirugia
1998;13:181-87.
aviso al médico tratante, para que sea mane-
2. Anaya DA, Quintero GA. Infección de sitio
jado de la manera más adecuada, e informan- operatorio. En: Infección en Cirugía. Editado por
do el caso al comité de vigilancia epide- GA Quintero, JA Nieto, C Lerma. Editorial Pana-
miológica de la herida quirúrgica. mericana. Bogotá, 2001.

1074
CAPÍTULO II: INFECCIÓN DEL SITIO OPERATORIO

3. Arias CA, Quintero GA, Vanegas BE, et al. preventing nosocomial infections in U.S. hospitals.
Surveillance of surgical site infection: a decade of Am J Epidemiol 1985; 121:182-185.
experience at a tertiary care center. World J Surg. 6. Jones G, Nahai F. Management of complex
In press, 2003. wounds. Curr Probl Surg 1998; 35: 181-250.
4. Cruse PJE, Foord R. The epidemiology of wound 7. Kaiser AB. Antimicrobial prophylaxis in surgery.
infection: A ten-year prospective study of 62,939 N Engl J Med 1986; 315: 1129-1134.
wounds. Surg Clin North Am 1980; 60: 27-40, 8. SHEA, APIC, CDC, SIS. Consensus paper on the
5. Haley RW, Culver DH, White WJ, et al. The efficacy surveillance of surgical wound infections. Infect.
of infection surveillance and control programs in Control Hosp. Epidemiol 1992; 13:599-605.

1075
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO III

Mononucleosis infecciosa

Lucas Andrés Salas Díaz, MD


Hospital Centro Oriente II Nivel
Secretaría Distrital de Salud
Bogotá

L a enfermedad hace parte del espectro de


las faringitis inespecíficas. El cuadro clíni-
co clásico comprende la denominada “fiebre
menores de cuatro años se puede presentar
con anticuerpos heterófilos negativos aunque
se trate de infección por Epstein-Barr.
glandular”, caracterizada por fiebre, malestar
general, hepatoesplenomegalia, linfadenopa- El segundo pico aparece en la segunda dé-
tías y dolor abdominal. cada de la vida; la transmisión se produce por
contacto íntimo (“enfermedad del beso”), en
La entidad sólo se documentó como entidad condiciones de hacinamiento. El cuadro es
nosológica aislada a partir de las observacio- mucho más florido y la seroconversión con
nes de Sprunt y Evans en 1921, quienes ade- aparición de anticuerpos heterófilos ocurre en
más del cuadro clínico describieron la linfoci- las primeras dos semanas.
tosis atípica característica de la enfermedad.
Posteriormente se descubrieron los anticuer- En lugares con malas condiciones higiénicas
pos heterófilos y se identificó el virus de se presume que hasta 95% de la población
Epstein-Barr como agente causal del linfoma haya seroconvertido en la infancia, pero aun
de Burkitt. con las mejores condiciones higiénicas la po-
blación en los países desarrollados puede ser
El Epstein-Barr es un virus del herpes tipo positiva en más de 50% a la edad de 25 años,
gamma, con tropismo por el epitelio escamo- por lo cual la presentación del cuadro en ma-
so de la orofaringe, el epitelio ductal parotideo, yores de 35 años es muy rara.
linfocitos B y epitelio escamoso cervical uteri-
no. La infección puede generar linfoma de La diseminación por fómites en adultos no es
Burkitt y carcinomas nasofaríngeos. común por tratarse de un virus muy lábil en
fuentes ambientales; la transmisión de perso-
na a persona puede ocurrir a partir de porta-
EPIDEMIOLOGÍA dores asintomáticos (10-20% de la población)
y de portadores transitorios, en quienes la
La infección por virus de Epstein-Barr sigue enfermedad pudo manifestarse o no, y quie-
una distribución bimodal; el primer pico se pre- nes pueden persistir como tales, produciendo
senta en menores de cinco años, en quienes virus activos hasta por 18 meses.
la transmisión se produce a través de fómites
contaminados con saliva. En los niños el cua- La incubación de la enfermedad es, en pro-
dro clínico es atípico y puede cursar como una medio, de 30 a 50 días en los adultos y puede
enfermedad exantemática inespecífica; en los disminuir a la mitad del tiempo en los niños.

1076
CAPÍTULO III: MONONUCLEOSIS INFECCIOSA

DIAGNÓSTICO toxoplasmosis, hepatitis viral, parotiditis y


roseola. Hay además una neutropenia abso-
Historia clínica y examen físico. El antece- luta y relativa en 60-90% de los casos. Puede
dente de contacto aparece en menos de 6% presentarse también trombocitopenia leve a
de los casos. El inicio es súbito, con la tríada moderada. Los anticuerpos heterófilos pueden
de odinofagia, fiebre y adenopatías; algunas demostrarse al comienzo de la enfermedad o
veces puede aparecer con una forma prodró- pueden aparecer de manera tardía. Es muy
mica de escalofrío, diaforesis, febrícula, ano- raro tener un falso positivo de una prueba de
rexia, astenia y adinamia, cefalea retrocular, “Monospot” por lo que no necesita confirma-
mialgias y plenitud abdominal. ción. En casos de anticuerpos heterófilos ne-
gativos o para el diagnóstico de casos atípicos
La consulta más común en el servicio de ur- se usa la medición de anticuerpos específi-
gencias es por odinofagia (dolor a la deglu- cos contra EBV.
ción), que en todo el cuadro clínico es perci-
bido como el más severo por el paciente; las
amígdalas presentan hipertrofia marcada y COMPLICACIONES
pueden hacer contacto en la línea media, toda
la faringe aparece eritematosa con exudado Se registran alteraciones hematológicas en
grisáceo y maloliente, hay petequias palatinas, 0,5-3% de los pacientes, generalmente tan
pero rara vez hay obstrucción de la vía aérea. leves que pueden pasar asintomáticas; estas
incluyen anemia hemolítica autoinmune y
La segunda causa de consulta son las linfade- púrpura trombocitopénica. Hay anergia tran-
nopatías, las cuales se distribuyen simétrica- sitoria.
mente en las cadenas cervicales posteriores
(80-90%), pero pueden comprometer cual- La rotura esplénica se presenta en 0,1-0,5%
quiera de las cadenas del cuello o las cade- de los casos, y se asocia con traumas leves
nas extracervicales (axilares, inguinales). La (tos, cambios de posición en la cama, defeca-
fiebre aparece con mayor frecuencia en la tar- ción, trauma contuso). La mortalidad puede
de y oscila entre 38°C y 39°C. Hay espleno- llegar hasta 30% si no se diagnostica a tiempo.
megalia en la mitad de los casos, la cual al-
canza su punto máximo luego de la segunda El compromiso neurológico varía entre mani-
semana de enfermedad. festaciones en el sistema nervioso central,
como meningitis aséptica, hasta neuritis perifé-
rica o de los nervios craneanos; en todos los
LABORATORIO casos el manejo es el soporte orgánico.

El hemograma muestra una linfocitosis abso- Otras complicaciones son la obstrucción se-
luta o relativa en cerca de 70% de los casos. vera de la vía aérea y la hepatitis.
Esta tiene un pico durante la 2ª y 3ª semana
de enfermedad y los linfocitos y monocitos
suman 60-70% de unos leucocitos totales que TRATAMIENTO
oscilan entre 12.000 y 18.000/mm3. Si bien
los linfocitos atípicos son parte de los hallaz- El manejo es sintomático con acetaminofén y
gos hematológicos, pueden encontrarse en antiinflamatorios no esteroideos. El uso de
otras enfermedades como CMV, rubeola, enjuagues con solución salina o antisépticos

1077
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

bucofaríngeos no irritantes apenas puede ser ser útil, así como el uso de esteroides en ence-
una medida de beneficio psicológico. falitis, pero siempre debe contarse con el apo-
yo del especialista para estos casos particu-
El tratamiento de las alteraciones autoinmunes lares.
se basa en un ciclo corto de esteroides, se-
gún concepto del especialista.
LECTURAS RECOMENDADAS
La actividad física debe restringirse por tres
semanas y los deportes de contacto por seis 1. Chapman A, Ellis C. Abdominal pain in acute
semanas o más, por el riesgo de rotura infectious mononucleosis. BMJ 2002; 324:660-661.
esplénica. 2. Pattison J. Human parvovirus B19: Hard to
differentiate from infectious mononucleosis. BMJ
1994; 308:149-150.
Los pacientes con complicaciones severas de- 3. Schooley RT. Infectious mononucleosis. En:
ben ser hospitalizados para manejo inicial es- Principles and Practice of Infectious Diseases.
pecializado. El uso de prednisona en casos Editado por G Mandell, J Bennett. Churchill
de obstrucción severa de la vía aérea puede Livingstone. New York, 2000.

1078
CAPÍTULO IV: HERPES GENITAL

CAPÍTULO IV

Herpes genital

Edgar M. Olmos Olmos, MD


Perla Furman Rzonzew, MD
Beatriz Torres Martínez, MD
Departamento de Dermatología
Hospital San José, Bogotá, DC

E l herpes es una enfermedad infecciosa


bastante común, y su forma genital es
globalmente reconocida como una de las prin-
Cuando el virus es inoculado por primera vez,
se replica en las células epiteliales de la piel y
las mucosas, causando lisis celular y conta-
cipales enfermedades de transmisión sexual. gio a células vecinas, lo cual desencadena una
El herpes genital es producido en la mayoría reacción inflamatoria. Si la replicación viral
de los casos (70-95%) por el Herpes Virus tipo continúa, puede ocurrir su diseminación a tra-
2, y en el porcentaje restante por el tipo 1. vés del torrente sanguíneo, afectando diferen-
tes órganos. En pacientes inmunosuprimidos
hay compromiso sistémico y afección de ór-
EPIDEMIOLOGÍA ganos profundos.

El herpes genital afecta a millones de perso- El virus del herpes migra hacia los ganglios
nas en el mundo y se estima que su prevalen- de la cadena dorsal de la medula espinal, don-
cia va en aumento, concordante con la epide- de permanece en forma latente e indefinida o
mia del SIDA. La seroprevalencia del herpes hasta una nueva recurrencia. El estrés físico
genital alcanza una cifra de 22%, que la cali- o emocional, el trauma local, otras infeccio-
fica como una de las enfermedades de trans- nes, la exposición solar, la menstruación o la
misión sexual más comunes. disminución de los mecanismos de defensa
inmunológicos precipitan de las recurrencias.
La infección es más frecuente en las mujeres
que en los hombres, y por lo general en las
de bajo nivel socioeconómico. CUADRO CLÍNICO
Síntomas prodrómicos como fiebre baja, linfa-
FISIOPATOLOGÍA denopatía inguinal dolorosa, malestar, ardor
genital, prurito y hormigueo, pueden apare-
Es transmitido por contacto directo con lesio- cer entre 7 y 10 días después de la exposi-
nes activas o con secreciones mucosas infec- ción inicial al virus.
tadas; también puede diseminarse durante
periodos de viremia asintomática, los cuales Las lesiones características son pápulas y ve-
ocurren entre el 5% y el 50% de los días del sículas agrupadas y dolorosas sobre una base
mes. eritematosa, las cuales se erosionan para

1079
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

formar úlceras y costras y luego cicatrizar en La reacción de la polimerasa en cadena (PCR)


el lapso de 2 semanas. Son altamente conta- exhibe una sensibilidad cercana al 100%.
giosas; en el hombre aparecen en el glande,
en el cuerpo del pene o en la región perineal,
y en las mujeres comprometen la vulva, la ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
vagina, el cuello uterino y la región perineal.
El tratamiento local de las lesiones para ga-
Pueden producir disuria, flujo vaginal, dispa- rantizar que permanezcan limpias y secas y
runia, y síntomas de compromiso sistémico. que además producen alivio sintomático, son
Es importante destacar que muchas personas los baños con solución salina. Se debe brin-
infectadas por primera vez pueden no tener dar analgesia adecuada, evitando los opiá-
manifestaciones clínicas de la enfermedad. ceos. Es importante la evaluación de los com-
pañeros sexuales para detectar ésta u otras
En general se presentan menos de 4 episodios enfermedades de transmisión sexual.
recurrentes en el año, pero en ocasiones las
exacerbaciones pueden ser más frecuentes.
TRATAMIENTO
DIAGNÓSTICO Diversas drogas han sido utilizadas en el tra-
tamiento y la supresión crónica del herpes ge-
Existen varias pruebas para confirmar el diag- nital, las cuales disminuyen la viremia y ace-
nóstico. La prueba de Tzanck se realiza me- leran la curación. Sin embargo, ninguna eli-
diante un frotis de la base de una úlcera o mina el herpes virus latente.
vesícula intacta, el cual se colorea con Giem-
sa. La presencia de células gigantes multinu- El herpes genital primario o recurrente puede
cleadas indica infección por el herpes virus ser seguro y efectivamente tratado si el diag-
pero no hace distinción entre el tipo 1 y el tipo nóstico y el inicio de la terapia adecuada ocu-
2 u otro tipo de herpes virus. rren antes de las 48-72 horas del inicio de los
síntomas. El tratamiento después de este pe-
La citología cérvico-vaginal puede tener una riodo puede disminuir síntomas de dolor y el
sensibilidad del 50% para detectar infección tiempo de curación, pero no es tan eficaz como
del epitelio por el virus herpes. la intervención inicial (Tabla 1).

La biopsia de piel es la herramienta más utili- El herpes genital primario se maneja con
zada. aciclovir, 200 mg 5 veces/día durante 7 días,
o valaciclovir 1g 2 veces/día por 7 días.
La detección de anticuerpos se usa para diag-
nosticar rápidamente la infección por el herpes El herpes genital recurrente debe ser tratado
simple y distinguir entre los diferentes sero- de forma individualizada. Si el paciente es
tipos. inmunocompetente y hay menos de 6 episo-
dios al año, se lo debe instruir en cuanto a
La serología mediante la técnica de Elisa se reconocer los factores desencadenantes y las
utiliza para detectar anticuerpos contra el her- primeras manifestaciones de las recurrencias,
pes tipo 1 y 2, con sensibilidad y especificidad con el fin de iniciar tratamiento tempranamen-
de 95% después de 2 semanas del contagio. te. Se debe utilizar aciclovir 200 mg 5 veces/

1080
CAPÍTULO IV: HERPES GENITAL

día por 5 días o valaciclovir 500 mg 2 veces/ El uso de foscarnet intravenoso en dosis de
día por 5 días. 40 mg/kg cada 8-12 horas por 10 días está
aprobado por la FDA para el tratamiento de
En la prevención de la transmisión de la en- las cepas resistentes.
fermedad se debe administrar terapia crónica
supresiva cuando ocurren 6 ó más recurren- En el manejo de la gestante se debe practicar
cias en un periodo de 12 meses o cuando un cesárea. El diagnóstico del primer episodio de
compañero de una pareja es seropositivo y el herpes genital materno en las primeras 28 se-
otro no lo es. Se debe administrar aciclovir manas del embarazo permite iniciar el trata-
400 mg 2 veces/día o valaciclovir 500 mg/día miento antiviral. Aunque la experiencia es li-
durante un periodo de 6 a 12 meses o en for- mitada, el aciclovir no se ha asociado con efec-
ma indefinida. tos teratogénicos. Si existe el antecedente de
herpes genital en la madre y el recién nacido
El paciente inmunosuprimido debe recibir aci- revela signos de infección sistémica, se debe
clovir oral 400 mg 5 veces/día por 10-21 días proceder a obtener muestras de sangre del
o hasta que resuelvan las lesiones, y en ca- niño para aislamiento del virus y a considerar
sos severos aciclovir 5 mg/kg cada 8-12 ho- la administración de aciclovir sistémico.
ras durante 7 días. La terapia crónica supre-
siva en ellos se realiza en forma similar.

TABLA 1. TRATAMIENTO DE LA INFECCIÓN GENITAL POR VIRUS HERPES SIMPLEX

DIAGNÓSTICO OPCIONES TERAPÉUTICAS DOSIS


Infección genital primaria Aciclovir 200 mg VO 5 veces/día por 7-10 días
Valaciclovir 1 g VO 2 veces/día por 7 días
Infección genital recurrente Aciclovir 200 mg VO 5 veces/día por 5 días ó
400 3 veces/día
Valaciclovir 500 mg VO 2 veces/día por 5 días
Terapia crónica supresiva para infección Aciclovir 400 mg 2 veces/día
genital ( > 6 episodios año) Valaciclovir 1 g VO/día
Infección genital recurrente en paciente Aciclovir 400 mg VO 5 veces/día por 10-21 días
inmunocomprometido ó 5 mg/kg c/8-12 horas por 7 días.

MANEJO INTERDISCIPLINARIO su vida. Además, este tipo de pacientes pue-


de exhibir resistencia al aciclovir y requerir una
En términos generales el herpes genital es terapia alterna. El urólogo y el ginecólogo de-
manejado por el dermatólogo, pero existen ben estar capacitados en el manejo de este
circunstancias que ameritan un manejo inter- tipo de patología y de otras enfermedades de
disciplinario. El infectólogo y el dermatólogo transmisión sexual, a las cuales se enfrentan
deben manejar en conjunto al paciente inmu- con frecuencia. El urólogo y el dermatólogo
nosuprimido, ya que éste se encuentra en deben trabajar en equipo, manejando la re-
especial riesgo de infección severa o disemi- tención urinaria que requiere cateterismo ure-
nada con secuelas que pueden comprometer tral bajo anestesia local o colocación de una

1081
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sonda por vía suprapúbica. El ginecólogo y el ACTUALIZACIÓN E INVESTIGACIÓN


dermatólogo deben también trabajar en equi-
po, evaluando y manejando el herpes genital El Imiquimod y el Resequimod son drogas
de la mujer embarazada, a fin de reducir la inmunomoduladoras que ofrecen otra alterna-
probabilidad de infección perinatal. tiva para el tratamiento de las infecciones por
el herpes virus. Se aplican en forma tópica
sobre las lesiones 3 veces en el transcurso
PRONÓSTICO de 1 semana, especialmente en el manejo de
infecciones resistentes o recurrentes.
El herpes genital es una infección crónica. En
la actualidad no existen tratamientos disponi- Se encuentran bajo investigación algunos tra-
bles capaces de erradicar completamente el tamientos tópicos para la infección genital que
virus. incluyen el Interferón en crema, el ácido unde-
cilénico en crema al 1%, el Foscarnet en cre-
ma al 0,3% y el Edoxudine en crema al 3%.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN También la Vidarabina y el Cidofovir son agen-
tes terapéuticos antivirales bajo investigación
Dada la gran diseminación de esta infección, que pueden ser utilizados para este fin.
parte importante de su control radica en las
medidas preventivas. Al igual que para otras
enfermedades de transmisión sexual, es ne- LECTURAS RECOMENDADAS
cesaria la educación, la promoción de compor-
tamientos sexuales seguros, tales como la 1. Atuesta J. Herpes simple y eczema herpético. Ur-
abstinencia de relaciones sexuales, el retardo gencias en Dermatología.
2. Benedetti J, Zeh J, Corey L. Clinical reactivation
en el comienzo de la vida sexual activa entre
of genital herpes simplex virus infection decreases
los jóvenes, la reducción del número de com- in frequency over time. Ann Intern Med 1999;
pañeros sexuales y el uso apropiado de con- 131:14-20.
dones. Hay que instruir a los individuos afec- 3. Corey L, Langenberg A, Ashley R, et al. Recom-
tados respecto a la necesidad de abstenerse binant glycoprotein vaccine for prevention of ge-
de relaciones sexuales mientras las lesiones nital HSV-2 infection. JAMA 1999; 282:331-340.
3. Drake S, Taylor S, Brown D. Improving the care of
estén activas, así como el deber que tienen patients with genital herpes. BMJ 2000; 321:619-623.
de informar su condición a todos aquellos con 4. Gilbert J, Drehs M, Weinberg J. Topical imiquimod
quienes han tenido contacto sexual. for acyclovir-unresponsive herpes simplex virus
2 infection. Arch Dermatol 2001; 137:1015-1017.
5. Spruance S, Tyring S, Smith M. Aplication of a
topical inmune response modifier, resequimod gel,
to modify the recurrence rate of recurrent genital
herpes: a pilot study. J Inf Dis 2001; 184:196-200.

1082
CAPÍTULO V: FIEBRE REUMÁTICA

CAPÍTULO V

Fiebre reumática

Mario Bernal, MD
Jefe, Departamento Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

Mónica Amador, MD
Residente de Cardiología
Universidad El Bosque

DEFINICIÓN

E s una enfermedad inflamatoria sistémica


del tejido conectivo, cuya característica
principal es el daño a las fibrillas de colágeno,
• Las variaciones entre las cepas de estrep-
tococos también constituyen un factor que
influye en la frecuencia de ataques de fie-
que se expresa como una reacción inflama- bre reumática. La proteína M de los estrep-
toria que compromete principalmente el cora- tococos muestra características estructu-
zón, las articulaciones y el sistema nervioso rales propias compartidas con el tejido car-
central, posterior a una infección faríngea o diaco humano. La marcada y drástica res-
de la amígdala por estreptococo del grupo A y puesta inmunológica juega un papel muy
luego de un periodo de latencia de 3 sema- importante en la predisposición del hués-
nas. La importancia reside en su capacidad ped a desarrollar la enfermedad.
de causar fibrosis de las válvulas cardiacas.
FISIOPATOLOGÍA
ETIOLOGÍA El estreptococo betahemolítico del grupo A re-
presenta el estímulo antigénico a través de
La faringoamigdalitis no tratada es el fenóme- algunas proteínas de membrana que, al po-
no precedente que la desencadena. El trata- nerse en contacto con los monocitos o macró-
miento antibiótico adecuado prácticamente fagos los activa fijándose en su membrana.
anula el riesgo de desarrollar la enfermedad. La célula activada se convierte en un monocito
activado capaz de presentar el antígeno al cual
Los principales factores de riesgo de fiebre reaccionan los linfocitos B, que son los res-
reumática son: ponsables de la producción de anticuerpos
• La magnitud de la respuesta inmunitaria a contra el microorganismo.
la faringitis estreptocócica previa.
• La persistencia del microorganismo durante En los tejidos el monocito se convierte en un
la convalecencia. macrófago y presenta el antígeno fijado en su

1083
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

membrana al linfocito. Los macrófagos acti- en el corazón es la única que se considera prác-
vados probablemente se convierten en células ticamente patognomónica y consiste en el nó-
gigantes de Aschoff, las cuales van a ser parte dulo de Aschoff, el cual persiste por varios años.
de la formación de lesiones granulomatosas;
éstas son patognomónicas de la carditis reu- La endocarditis consiste en una valvulitis ve-
mática y se conocen como nódulos de Aschoff, rrugosa que puede conducir a daño perma-
que pueden permanecer durante muchos nente con regurgitación o estenosis, sobre
años después de un ataque reumático. todo de las válvulas mitral y aórtica; es mu-
cho menos frecuente en la tricúspide y ocurre
La fase aguda de la enfermedad se caracteri- por rareza en la pulmonar. La patología del
za por reacciones inflamatorias exudativas y nódulo subcutáneo es muy similar a la del nó-
proliferativas que afectan el tejido conectivo y dulo de Aschoff´, en las articulaciones ocurre
el colágeno. El proceso patológico es difuso, una sinovitis exudativa, no proliferativa y que
pero ataca principalmente corazón, cerebro, no deja cicatriz.
articulaciones, tejidos cutáneo y subcutáneo;
por lo general se registra una vasculitis gene-
ralizada de vasos pequeños. DIAGNÓSTICO
El diagnóstico se hace cuando se presentan
EPIDEMIOLOGÍA dos criterios mayores o uno mayor y dos me-
nores (Tabla No. 1).
La incidencia y la prevalencia de cardiopatía
reumática son muy distintas en las diversas
El diagnóstico de fiebre reumática sigue sien-
partes del mundo. A principios del siglo XX,
do clínico; es poco admisible en pacientes sin
en los Estados Unidos superaba los 100 ca-
fiebre y sin manifestaciones articulares y sola-
sos por 100.000 personas; los datos estadísti-
mente se establece con base en un título alto
cos actuales señalan que es menor de 2 casos
de antiestreptolisinas. El error diagnóstico co-
por 100.000 personas. En Colombia las esta-
mún lleva a que pacientes sin fiebre reumática
dísticas son escasas y no se han hecho estu-
sean sometidos a tratamiento por varios años.
dios epidemiológicos representativos.

Dada la relación causal entre la fiebre reumá- Los síntomas se inician con malestar general,
tica y la faringitis por estreptococo del grupo astenia, adinamia, mialgias, artralgias, hipo-
A, la epidemiología de las dos enfermedades rexia y fiebre de predominio vesperal, que
es muy similar. Los ataques iniciales de fiebre usualmente no es muy alta y no sobrepasa
reumática suceden más bien entre los 6 y los los 38,5°C. Con este cuadro pueden asociarse
15 años; el riesgo aumenta en ciertas pobla- cualquiera de las siguientes manifestaciones:
ciones: personas en hacinamiento y personas
en contacto continuo (como los escolares y Artritis: es el signo principal, pero el menos
los militares). específico. Casi siempre afecta grandes arti-
culaciones en forma asimétrica y migratoria
(rodillas, codos, muñecas, tobillos). La artritis
PATOLOGÍA es benigna y no ocasiona deformidad perma-
nente, si se exceptúa una forma muy poco fre-
Aunque el compromiso cardiaco es el de una cuente llamada artritis de Jaccoud, que por
pancarditis, se puede aseverar que la lesión persistencia de la inflamación erosiona las ca-

1084
CAPÍTULO V: FIEBRE REUMÁTICA

bezas de los metacarpianos y termina en de- Corea de Sydenham: ocurre en 20% de los
formidades típicas de los dedos. Los signos pacientes. La manifestación del ataque agudo
característicos de inflamación, más no de in- en el sistema nervioso central es la lesión de
fección, se ven en el líquido sinovial. En los los ganglios basales y del núcleo caudado, un
casos en que no se recibe tratamiento, el cua- fenómeno tardío en la fiebre reumática. Por
dro puede durar 2 a 3 semanas. Un signo no- lo general aparece entre 2 y 3 meses luego
table es su marcada respuesta a los salicilatos. del inicio de la infección estreptocócica. Se
caracteriza por movimientos involuntarios, fal-
Carditis: es una pancarditis que afecta mio- ta de coordinación muscular y labilidad emo-
cardio, pericardio y endocardio. La intensidad cional. Afecta sobre todo los músculos de la
es variable; en su forma más grave puede pre- cara y las extremidades; el habla puede tor-
narse explosiva y difícil.
sentarse la muerte por insuficiencia cardiaca.
Afecta las válvulas mitral y aórtica, así como
Nódulos subcutáneos: son firmes, indoloros,
las cuerdas tendinosas de la válvula mitral.
se desplazan con facilidad y llegan a medir
La insuficiencia mitral es el signo más carac- hasta 2 cm; aunque rara vez aparecen, su
terístico y se manifiesta por un soplo sistólico presencia debe hacer sospechar carditis. Por
regurgitante, audible con mayor intensidad en lo regular se presentan en la cara extensora
los focos de la punta, acompañado de un re- de las articulaciones, en particular de codos,
tumbo funcional por hiperreflujo, el cual se de- rodillas y muñecas.
nomina retumbo de Carey-Coombs. Cuando
cede la fase aguda, la cicatrización va convir- Eritema marginado: se observa en menos
tiendo la insuficiencia en estenosis mitral. Se de 5% de los pacientes. Es una erupción eva-
pueden combinar ambos mecanismos. nescente, macular no pruriginoso, de centro
pálido y circular, de bordes serpiginosos, fu-
La taquicardia es el signo más temprano de gaz, de corta duración. Su localización ocurre
miocarditis. También hay inflamación de la su- en el tronco, glúteos y la región proximal de
perficie visceral y parietal del pericardio y apa- las extremidades, pero no en la cara. También
rece pericarditis. es más común en los casos con carditis.

TABLA No.1. CRITERIOS DE JONES PARA EL DIAGNÓSTICO DE FIEBRE REUMÁTICA

Criterios Mayores Criterios Menores


· Carditis · Clínicos
· Artritis · Fiebre
· Corea · Artralgias
· Eritema marginado · Malestar general
· Nódulos subcutáneos · Laboratorio
· Eritrosedimentación elevada
· Proteína C reactiva positiva
· Leucocitosis
· Intervalo PR prolongado
Evidencia de infección estreptocócica:
· Aumento de anticuerpos contra estreptococo: antiesptreptolisinas y otros
· Cultivo faríngeo positivo para estreptococo grupo A
· Escarlatina reciente

1085
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MANIFESTACIONES MENORES • Artritis reactiva, específicamente por Yersi-


nia enterocolitica.
Los hallazgos de fiebre y artralgias son inespe- • Coexistencia de fiebre reumática aguda y
cíficos y tienen un valor diagnóstico muy limita- endocarditis bacteriana.
do. Son usados como soporte diagnóstico • Artritis séptica.
cuando se presenta una manifestación mayor. • Anemia de células falciformes.
• Lupus eritematoso sistémico.
• Enfermedad del suero.
PRONÓSTICO • Enfermedad de Still de comienzo en el
adulto.
La enfermedad evoluciona en seis semanas
en la mayoría de los casos (75%), y en 12
semanas (90%) generalmente ya ha termina- TRATAMIENTO
do. La frecuencia de las recurrencias ha ido
disminuyendo desde la introducción de la pro- El tratamiento de la enfermedad se reduce al
filaxis secundaria, alrededor de 30% de los reposo absoluto en cama y al uso de la aspiri-
pacientes jóvenes o niños terminan con daño na. La dosis aproximada debe ser de 100 mg/
valvular permanente. kg por día, dividida en 4 a 5 dosis, tratando de
obtener un nivel plasmático de 25 a 30 mg/
Las lesiones en orden de frecuencia son: es- 100 mL. No cambia el curso de la enferme-
tenosis mitral, insuficiencia mitral, doble lesión dad, como tampoco lo hacen los corticoste-
aórtica y estenosis tricuspídea. La insuficien- roides, pero mejora rápidamente la artritis y
cia mitral inicial desaparece con frecuencia y la fiebre se hace de menor duración.
la estenosis mitral se va desarrollando muy
lentamente; la regurgitación aórtica, una vez Los pacientes con carditis severa o con insu-
se vuelve sintomática, sigue un curso rápida- ficiencia cardiaca responden rápidamente a
mente progresivo. los esteroides. La dosis de prednisona es de
1-2 mg/k/día. Las indicaciones precisas de los
Se cree que algunos casos de prolapso de la esteroides son:
válvula mitral son secuelas de fiebre
reumática. 1. Pancarditis reumática grave, casos con in-
suficiencia cardiaca grave y gran dilatación
de cavidades reumáticas.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL 2. Actividad reumática grave que puede cul-
minar con la muerte.
En niños, principalmente en aquellos con pro-
cesos febriles, la evolución y la aparición del El reposo debe ser mantenido por dos a tres
cuadro típico hacen el diagnóstico. Lo mismo semanas mínimo; si hay carditis, por seis se-
podría decirse de la diferenciación con la ar- manas. En presencia de insuficiencia cardiaca
tritis reumatoide juvenil del tipo de comienzo pueden utilizarse diuréticos y digital. Debe
agudo sistémico y en adultos con las artritis practicarse en forma simultánea la erradica-
reactivas cuya evolución es mucho más cróni- ción del estreptococo (ver Prevención prima-
ca. En los adultos el diagnóstico diferencial ria).
debe hacerse con:

1086
CAPÍTULO V: FIEBRE REUMÁTICA

PREVENCIÓN Los pacientes con enfermedad reumática


valvular se deben someter al régimen reco-
Prevención primaria: el tratamiento consiste mendado para profilaxis de endocarditis
en lo que se ha llamado erradicación del es- bacteriana.
treptococo. La terapia antimicrobiana se debe
extender hasta 9 días después del inicio de
un episodio de faringoamigdalitis para evitar
el ataque primario. La droga de elección es la LECTURAS RECOMENDADAS
penicilina y la preparación más conveniente
es la benzatínica intramuscular, 600.000 U en 1. Amigo M, Martínez M, Reyes P. Acute rheumatic
dosis única para pacientes de peso menor de fever. Rheum Dis Clin North Am 1993; 19:33-42.
30 kg ó 1´200.000 U para los de peso mayor. 2. Chauvaud S, Fuzellier JF, Berrebi A, et al. Long-
term (29 years) results of reconstructive surgery
En casos de alergia a la penicilina se usa la
in rheumatic mitral valve insufficiency. Circulation
eritromicina, 40 mg/kg por día, dividida en 2 a 2001; 104:12-15.
4 dosis diarias, sin sobrepasar 1 g por día. 3. Cooper RJ, Hoffman JR, Bartlett JG, et al.
Las drogas bacteriostáticas como las sulfas y Principles of appropriate antibiotic use for acute
las tetraciclinas no se recomiendan por ser pharyngitis in adults: background. Ann Emerg Med
inefectivas en la prevención primaria. 2001; 37:711-719.
4. Figueroa FE, Fernandez MS, Valdes P, et al.
Prevención secundaria: es muy efectiva y si Prospective comparison of clinical and echocardio-
graphic diagnosis of rheumatic carditis: long term
se lleva a cabo de manera adecuada, prácti-
follow up of patients with subclinical disease. Heart
camente elimina las recurrencias. Se inicia con 2001; 85:407-410.
el tratamiento de erradicación del estreptococo 5. Haidan A, Talay SR, Rohde M, et al. Assessment
arriba descrito, seguido de la inyección men- of mitral regurgitation. Heart 2002; 88:9S-11S.
sual de 1´200.000 U de penicilina benzatínica. 6. Joachim F. Fiebre reumática. Compendio de Te-
En los casos de alergia se puede usar la sulfa- rapéutica. Asociación Colombiana de Medicina
diazina 0,5 g diariamente en pacientes con Interna. Ediciones Acta Médica. Bogotá, 1992.
menos de 30 kg de peso y 1,0 g en los de 7. John S, Ravikumar E, John CN, Bashi VV. 25-year
experience with 456 combined mitral and aortic
peso mayor. Otra alternativa es el uso de valve replacement for rheumatic heart disease.
eritromicina 250 mg dos veces al día. Ann Thorac Surg 2000; 69:1167-72.
8. Osmon DR. Antimicrobial prophylaxis in adults.
No hay consenso absoluto sobre la duración Mayo Clin Proc 2000; 75:98-109.
de este tratamiento profiláctico. Lo ideal sería 9. Pinals R. Polyarthritis and fever. N Engl J
mantenerlo de por vida; lógicamente los pa- Med.1994; 30:769-774.
10. Roberts S, Kosanke S, Terrence Dunn S, et al.
cientes con enfermedad valvular deben conti-
Pathogenic mechanisms in rheumatic carditis:
nuar el tratamiento, aún después del implan- focus on valvular endothelium. J Infect Dis 2001;
te de válvulas protésicas. Los pacientes que 183: 507-511.
desarrollaron la enfermedad sin carditis deben 11. Taranta A, Markowitz M. Rheumatic fever. Second
continuar la profilaxis durante 5 años después edition. Kluwer Academic Publishers. New York,
del último ataque, o hasta que cumplan 21 1990.
años.

1087
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Infección por virus


de la inmunodeficiencia humana

Lucas Andrés Salas Díaz, MD


Hospital Centro Oriente
Bogotá

DEFINICIÓN CLASIFICACIÓN

S e denomina infección por el virus de la


inmunodeficiencia humana adquirida
(VIH) al proceso patológico que se inicia a
Se adopta la clasificación de los Centros para
el Control y Prevención de Enfermedades
(CDC) de Atlanta para la categorización clíni-
partir del ingreso del virus al cuerpo hasta el ca del paciente, en la cual se combinan los
desarrollo de síntomas. Una vez que el virus criterios clínicos con el conteo de linfocitos T
ha invadido las células CD 4(+), el proceso es helper (ayudadores) en sangre periférica.
irreversible y progresa hacia el deterioro gra-
dual y crónico del sistema inmune, presentan-
do en algún momento de la enfermedad com-
plicaciones infecciosas o tumorales que pue-
den comprometer la vida del paciente.

TABLA 1. CLASIFICACIÓN DE LOS CDC PARA INFECCIÓN VIH EN PACIENTES MAYORES DE 13 AÑOS

CATEGORÍAS CLÍNICAS
Conteo CD 4(+) A B C
1. <500 células A1 B1 C1
2. 200-499 células A2 B2 C2
3. <200 células A3 B3 C3

Los recuadros sombreados corresponden a SIDA.

398
CAPÍTULO VI: INFECCIÓN POR VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA

TABLA 2. CATEGORÍAS CLÍNICAS

A Asintomático
Linfadenopatía persistente
B HIV (+) con déficit en la inmunidad celular Angiomatosis bacilar
secundario a la enfermedad Candidiasis orofaríngea
Candidiasis vulvovaginal persistente
Displasia cervical, carcinoma in situ
Fiebre >38,5°C o diarrea por más de un mes
Leucoplacia vellosa
Herpes zoster, dos episodios o dos dermatomas comprometidos
Púrpura trombocitopénica autoinmune
Listeriosis
Enfermedad pélvica inflamatoria (en especial con absceso tuboovárico)
Neuropatía periférica
C SIDA Candidiasis bronquial, traqueal o pulmonar
Candidiasis esofágica
Cáncer de cérvix invasivo
Coccidioidomicosis diseminada, extrapulmonar
Criptococosis extrapulmonar
Criptosporidiosis crónica intestinal
Infección por citomegalovirus diferente a hígado, bazo o ganglios
linfáticos
Retinitis por citomegalovirus con pérdida de la agudeza visual
Encefalopatía por HIV
Infección por herpes con úlcera crónica mayor de un mes, bronquitis,
neumonitis, esofagitis.
Histoplasmosis diseminada, extrapulmonar.
Isosporidiasis crónica intestinal mayor de un mes
Sarcoma de Kaposi
Linfoma de Burkitt o equivalente
Linfoma inmunoblástico o equivalente
Linfoma primario de sistema nervioso central
Infección por complejo Mycobacterium avium o Mycobacterium kansasii
diseminado, extrapulmonar
Tuberculosis
Otras micobacterias diseminadas o extrapulmonares
Neumonía por Pneumocystis carinii
Neumonía recurrente menor de un mes.
Leucoencefalopatía progresiva multifocal
Sepsis por Salmonella spp. Recurrente
Toxoplasmosis cerebral
Síndrome de desgaste orgánico por HIV

399
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El paciente HIV (+) representa un reto parti- consulta, puede requerir manejo avanzado de
cular para el médico de urgencias, quien no la vía aérea, soporte ventilatorio y reanimación
sólo debe buscar las patologías típicas para con líquidos e inotrópicos.
la sintomatología esperada, sino todo el es-
pectro de enfermedades atípicas y con sínto- Todo paciente en urgencias debe ser maneja-
mas floridos e inespecíficos. do como si fuera portador del virus transmisi-
ble por sangre y secreciones. Cuando exista
El paciente con infección por HIV puede pre- un diagnóstico confirmado, deben redoblarse
sentarse en dos contextos clínicos principales: las precauciones universales.
la presentación con alguna de las enfermeda-
des enumeradas anteriormente y sin un diag- El paciente consciente debe ser interrogado
nóstico de infección conocido, y el paciente sobre algunos puntos muy precisos para de-
en quien ya se ha establecido el diagnóstico terminar el estado de portador o la sospecha
y presenta una infección oportunista, una neo- epidemiológica de portador de HIV. Si el pa-
plasia o la agudización de una enfermedad ciente se reconoce como seropositivo, debe
latente. interrogarse el uso de antirretrovirales, si co-
noce sus conteos de CD 4(+) y el estado de
La prioridad es la reanimación rápida (secuen- carga viral, el uso de medicamentos para pro-
cia ABC), que según la patología por la cual filaxis de infecciones o neoplasias previas.

TABLA 3. OTRAS PREGUNTAS DE INTERÉS EPIDEMIOLÓGICO PARA RIESGO DE INFECCIONES


OPORTUNISTAS EN HIV

1. ¿Tiene trabajo? ¿A qué se dedica? (exposiciones ocupacionales)


2. ¿Tiene alguna actividad recreativa en particular? (exposición ambiental)
3. ¿Ha viajado recientemente? ¿A dónde? (exposición accidental, enfermedades endémicas)
4. ¿Posee una mascota? (zoonosis)
5. ¿Consume alimentos crudos o poco cocinados? (intoxicación alimentaria, parásitos, etc.)
6. ¿Toma agua de la llave? (según la zona geográfica, infecciones por quistes de parásitos)
7. ¿⁄ltima relación sexual sin preservativo? (ETS, citomegalovirus, parásitos)
8. ¿Usa drogas inyectadas? ¿Ha compartido jeringas? (hepatitis, bacteremias)

La prioridad en urgencias es estabilizar el Un paciente estable con manejo antirretroviral


paciente, y no tanto establecer un diagnósti- adecuado y conteo de células CD 4(+) por en-
co etiológico fino; por ello, tras reanimar al cima de 200 sin una enfermedad que com-
paciente inestable, se procede a buscar el prometa la vida, puede ser manejado en for-
órgano o sistema principalmente afectado y ma ambulatoria. En general un paciente con
se estratifica la gravedad de la enfermedad diagnóstico de SIDA, debe ser hospitalizado
para definir un manejo ambulatorio u hospita- para estudio y manejo integral por el alto ries-
lario. go de cursar con infecciones oportunistas o
neoplasias que comprometan su vida.

400
CAPÍTULO VI: INFECCIÓN POR VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA

El paciente febril con SIDA puede presentar tas y anticuerpos IgM en caso de ser un pa-
patología infecciosa de cualquier etiología ciente no expuesto previamente. Si la causa
(bacterias, hongos, virus, parásitos, neopla- de la fiebre continúa sin ser claro su origen o
sias); cuando el foco primario no es claro, pue- si existe compromiso neurológico, se debe
de asociarse a complejo Mycobacterium avium realizar una punción lumbar.
en etapas iniciales, viremia por citomega-
lovirus y neoplasias (linfomas).
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
DIAGNÓSTICO En la siguiente tabla se incluyen algunas infec-
ciones oportunistas causantes de fiebre en el
La investigación inicial debe incluir hemogra- paciente inmunosuprimido con SIDA, las cua-
ma, uroanálisis, pruebas de función hepática les pueden manifestarse sin compromiso de
y renal (según el caso), radiografía de tórax y un órgano específico. Una vez localizado el ór-
hemocultivos (bacterias, hongos, micobacte- gano blanco (retina, pulmón, tracto gastroin-
rias, anaerobios). Otros estudios son: VDRL, testinal) se debe realizar el manejo específico
antígenos en sangre de patógenos oportunis- indicado por el especialista correspondiente.

Tabla 4.

Infección Droga Dosis Ruta Intervalo Duración


oportunista
Citomegalovirus Ganciclovir 5 mg/kg IV bid 14-21 d
seguido de
Gancicloviro 5 mg/kg IV qd de por vida
Foscarnet 60 mg/kg IV tid 14-21 d
seguido de
Foscarneto 90-120 mg/kg IV qd De por vida
Ganciclovir (implante — — c/6-9 m De por vida
en retinitis)o
Cidofovir 5 mg/kg IV c/semana 2 semanas
5 mg/kg IV c/2 semanas De por vida
Complejo Claritromicina 500 mg PO qd De por vida
Mycobacterium
avium
Etambutol 15 mg/kg PO qd De por vida

EVALUACIÓN CLÍNICA Los síntomas pulmonares pueden ir desde


disnea de esfuerzos y tos seca (neumonía por
A la revisión por sistemas el paciente puede P. carinii), hasta expectoración purulenta o
revelar pérdida de peso, astenia, adinamia y hemoptoica (neumonías bacterianas, tubercu-
anorexia. losis, infección pulmonar por hongos). El

401
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

paciente con dificultad respiratoria progresiva ESTUDIOS RADIOLÓGICOS


debe ser valorado rápidamente, y si existe un
alto riesgo de falla respiratoria se debe asegu- Radiografía de tórax: el patrón radiográfico
rar la vía aérea y dar soporte ventilatorio. En puede ser inespecífico aunque algunos patro-
pacientes con un conteo bajo de CD4(+) la nes pueden ser muy sugestivos de algunas
neumonía por P. carinii es la causa más fre- patologías.
cuente de compromiso respiratorio, además
de ser una presentación frecuente como de-
but de la infección por HIV.

TABLA 5.

Patrón radiológico Patología


Infiltración intersticial difusa (patrón en vidrio esmerilado) Neumonía por Pneumocystis carinii
Citomegalovirus
Mycobacterium tuberculosis
Complejo Mycobacterium avium
Histoplasmosis
Coccidioidomicosis
Neumonitis intersticial linfoide
Consolidación lobar, lobulillar Neumonía bacteriana
Mycoplasma pneumoniae
Pneumocystis carinii
Mycobacterium tuberculosis
Complejo Mycobacterium avium
Lesiones nodulares Sarcoma de Kaposi
Mycoabterium tuberculosis
Complejo Mycobacterium avium
Infección por hongos
Toxoplasmosis
Lesiones cavitarias Neumonía por Pneumocystis carinii
Mycobacterium tuberculosis
Infección bacteriana
Infección micótica
Adenopatía mediastinal, peritraqueal. Sarcoma de Kaposi
Linfoma
Mycobacterium tuberculosis
Criptococosis

402
CAPÍTULO VI: INFECCIÓN POR VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA

ESTUDIO COMPLEMENTARIOS de síntomas respiratorios recientes, hipoxia,


leucocitosis, tos productiva, obligan a la hospi-
El examen de esputo puede ayudar en el diag- talización de un paciente con infección por VIH.
nóstico en urgencias; sin embargo, ocasional-
mente es necesario realizar broncoscopia o
lavado broncoalveolar para definir el diagnós- TRATAMIENTO
tico definitivo. En infección por microorganis-
mos intracelulares es necesaria la biopsia bron- En la siguiente tabla se enumera el tratamiento
quial distal, procedimiento que no se debe rea- de las entidades patologías pulmonares más
lizar en el servicio de urgencias. La aparición frecuentes.

TABLA 6.
Infección Droga Dosis Ruta Intervalo Duración
oportunista
Neumonía por Trimetroprim 5 mg/kg PO, IV tid 21 d
Pneumocystis /sulfametoxazolo /25 mg/kg
carinii
Trimetroprim + 300 mg PO tid 21 d
dapsonao 100 mg PO qd
Pentamidina o 3-4 mg/kg IV (IM) qd 21 d
Atovacuona o 750 mg PO bid 21 d
Clindamicina + 300-450 mg PO, IV q6h 21 d
primaquinao 15 mg PO qd
Trimetrexate + 45 mg/m2 IV qd 21 d
leucovorin
20 mg/m2 PO, IV q6h
*
Prednisona* (terapia 40 mg PO 21 d
adyuvante para
episodios severos)
Neumonía por Trimetroprim / 1 tableta sencilla PO qd De por vida
Pneumocystis sulfametoxazolo o de doble poder
carinii
(mantenimiento)
Dapsona 100 mg PO qd De por vida
Coccidioidomicosis Anfotericina B 0.5-1.0 mg/kg IV qd ≥56 d
seguida de
Itraconazol 300 mg PO bid 3d
seguido de 200 mg PO bid de por vida
(Pulmonar) Fluconazol 400-800 mg PO qd De por vida
Histoplasmosis Anfotericina B 0.5-1.0 mg/kg IV qd ≥28-56 d
seguido de
Itraconazol 200 mg PO qd De por vida

*Prednisona, 40 mg dos veces al día ◊ 5 días, seguida de 20 mg dos veces al día ◊ 5 días, seguida de 20 MG cuatro veces al día
◊ 11 días.

403
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En el manejo de la tuberculosis pulmonar siones, signos de focalización, deben ser ma-


(TBC) se usa el esquema estándar de 6 a 9 nejados en forma convencional; el paciente
meses; sin embargo, el uso de rifamicinas está febril con signos meníngeos requiere punción
contraindicado durante la terapia antirretroviral lumbar para evaluar etiología (citoquímico,
por los efectos inductores sobre el CPY450. Gram, tinta china, detección de antígenos de
La primera opción de tratamiento debe incluir hongos o micobacterias, según el caso).
un esquema con estreptomicina sin rifampici-
na, cuidando los efectos nefrotóxicos y ototó- El paciente focalizado con signos de hiperten-
xicos del medicamento, o el uso de rifabutina sión endocraneana severa debe valorarse con
en la mitad de la dosis recomendada para la tomografía axial computadorizada (TAC) de ur-
población general. gencia para descartar lesión expansiva (linfomas
primarios del sistema nervioso central), infec-
Pacientes con alteración del estado de con- ciones parasitarias o virales con lesiones focales
ciencia, con síntomas neurológicos, convul- (citomegalovirus, toxoplasmosis, criptococosis).

TABLA 7.

Infección Droga Dosis Ruta Intervalo Duración


oportunista
Toxoplasmosis Sulfadiazina + 1-2 g PO q6h De por vida
pirimetamina + 100 mg PO qd
leucovorino 10-25 mg PO, IV qd
Clindamicina + 450-600 mg PO q6h De por vida
pirimetamina 50-100 mg PO qd
Criptococco Anfotericina B + 0,7 mg/kg IV qd ≥ 14 d
flucitosina seguido de 25 mg/kg PO q6h ≥ 14 d
Fluconazol seguido 400 mg PO qd 8 semanas
de
Fluconazol 200 mg PO qd De por vida

El compromiso gastrointestinal incluye diarrea ambulatoria (candidiasis si no existe proble-


crónica, candidiasis del tracto gastrointestinal mas de deglución, diarrea crónica sin deshi-
superior, sepsis de origen gastrointestinal. El dratación aguda y tolerancia a las sales de
manejo de la patología crónica con paciente rehidratación oral).
estable se puede realizar de manera

404
CAPÍTULO VI: INFECCIÓN POR VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA

TABLA 8.

Infección Droga Dosis Ruta Intervalo Duración


oportunista
Criptosporidiosis Paromomicina 1,0 g PO bid De por vida
Microsporidiosis Albendazol 400 mg PO bid De por vida
(excepto Entero-
cytozoon bieneusi)
Isosporiasis Trimetroprim / 160 mg PO, IV q6h 10 d
sulfametoxazol 800 mg
seguido de
Trimetroprim/ 160 mg PO bid 14 d
sulfametoxazol 800 mg
Candidiasis
Oral Fluconazol 100-200 mg PO, IV qd 5-10 d
Esofágica Fluconazol 100-400 mg PO, IV qd 14-21 d

El manejo de la salmonelosis se realiza de la Las manifestaciones cutáneas de la enferme-


manera usual según los protocolos para enfer- dad por HIV/SIDA, corresponden a patologías
medad invasiva y según la resistencia antibiótica neoplásicas o infecciosas que pueden presen-
de la zona (ciprofloxacina 500 mg ppor vía oral, tarse en cualquier momento de la evolución
dos veces al día, o alternativas endovenosas si de la enfermedad; las enfermedades herpéti-
hay compromiso del estado general). cas invasivas o el zoster diseminado requie-
ren manejo hospitalario con antivirales endo-
El uso de ketoconazol no se recomienda como venosos.
primera opción para candidiasis por el riesgo
de insuficiencia suprarrenal.

TABLA 9.

Infección Droga Dosis Ruta Intervalo Duración


oportunista
Herpes simplex Acicloviro 200 mg PO 5 veces al día 10-14 d
Famcicloviro 125-250 mg PO Bid 10-14 d
Valaciclovir 500 mg PO Bid 10-14 d
Varicela-zóster
Dermatoma Acicloviro 800 mg PO 5 veces al día 7-10 d
(Herpes zoster)
Famcicloviro 500 mg PO tid 7-10 d
Valaciclovir 1000 mg PO tid 7-10 d
Diseminado Aciclovir 10-12 mg/kg IV tid 7-14 d
Bartonella Eritromicinao 500 mg PO q6h 12 sem
(Rochalimaea) spp.
Doxiciclina 100 mg PO bid 12 sem

405
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Todo paciente con sospecha de HIV debe ser La lesión profunda con aguja hueca, con san-
remitido para manejo especializado por un mé- gre visible, proveniente de paciente con con-
dico con experiencia en HIV, o por un espe- teos bajos de CD 4(+) y alta carga viral, requiere
cialista en enfermedades infecciosas. un régimen con el esquema básico más indi-
navir 800 mg por vía oral tres veces al día o
nelfinavir 750 mg vía por oral tres veces al día.
MANEJO DE LA EXPOSICIÓN
OCUPACIONAL A HIV Se deben tomar exámenes de base tanto en
el accidentado como en el paciente, y la situa-
Toda exposición a sangre, semen, secreciones ción se debe reevaluar en 72 horas para deter-
vaginales, líquido cefalorraquídeo, sinovial, minar toxicidad y la necesidad de continuar el
pleural, peritoneal, pericárdico o amniótico, tratamiento; la profilaxis debe extenderse por
debe ser notificada al comité de infecciones cuatro semanas. El control posterior debe ha-
de la institución, y debe manejarse como una cerse a los tres meses, seis meses y un año,
urgencia prioritaria. según el concepto de medicina ocupacional.

La notificación y el inicio de esquemas profilác- Se han reportado 50% de eventos adversos


ticos debe realizarse en las primeras 24 horas, asociados a la terapia antirretroviral y 33% de
y preferiblemente en las primeras 8 horas de eventos adversos severos que requirieron sus-
ocurrido el evento. pensión de la terapia (astenia, adinamia, náu-
seas, diarrea, nefrolitiasis, hepatitis, pancito-
El riesgo relativo de adquirir la infección por penia).
lesión percutánea es de 0,3% y por salpicadu-
ra a mucosas de 0,09%. Sin embargo, el ries-
go de transmisión percutánea es similar al de LECTURAS RECOMENDADAS
un coito anal receptivo, por lo cual no debe
subestimarse el riesgo en ningún accidente 1. CDC. 1993 Revised Classification System for HIV
laboral. Infection and Expanded Surveillance Case
Definition for AIDS Among Adolescents and Adults.
MMRW 1992; 41(RR-17).
El riesgo aumenta en accidente con enfermos
2. Centers for Disease Control and Prevention.
terminales (SIDA), virus formador de sincitios, Guidelines for Preventing Opportunistic Infections
accidentes con aguja hueca o sangre visible. Among HIV-Infected Persons - 2002 Recommen-
dations of the U.S. Public Health Service and the
En lesiones superficiales o salpicaduras me- Infectious Diseases Society of America. MMWR
nores no se recomienda profilaxis por el ries- 2002; 51(No. RR-8):1-60.
go de toxicidad asociado. 3. Centers for Disease Control and Prevention.
Guidelines for using antiretroviral agents among
HIV-infected adults and adolescents: recommen-
En las lesiones con rasguño, salpicaduras
dations of the Panel on Clinical Practices for Treat-
mayores, aguja sólida, paciente HIV (+) con ment of HIV. MMWR 2002; 51(No. RR-7):1-64.
conteo CD 4(+) y carga viral baja, se reco- 4. Centers for Disease Control and Prevention.
mienda zidovudina 300 mg por vía oral dos Management of possible sexual, injecting-drug–
veces al día, más lamivudina 150 mg por vía use, or other nonoccupational exposures to HIV,
oral dos veces al día. including considerations related to antiretroviral

406
CAPÍTULO VI: INFECCIÓN POR VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA HUMANA

therapy. Public Health Service Statement. MMWR 7. Infectious Diseases Society Of America. Primary
1998; 47(No. RR-17):1-19. Care of Patients Infected with Human Immunode-
5. Centers for Disease Control and Prevention. ficiency Virus. Clin Inf Dis 1998; 26:275–6.
Updated U.S. Public Health Service Guidelines for 8. Kaplan J, Masur H, Holmes K et al. An overview
the Management of Occupational Exposures to of the 1999 US Public Health Service/Infectious
HBV, HCV, and HIV and Recommendations for Diseases Society of America Guidelines for Pre-
Postexposure Prophylaxis. MMRW 2001; venting Opportunistic Infections in Human Immu-
50(RR11);1-42. nodeficiency Virus–Infected Persons. Clin Inf Dis
6. Centers for Disease Control and Prevention. 2000; 30:S15–28.
Updated U.S. Public Health Service Guidelines for 9. Masur H. Managemente of Opportunistic Infections
the Management of Occupational Exposures to Associated with Human Immunodeficiency
HBV, HCV, and HIV and Recommendations for Syndrome. En: Mandell G, Bennett J. Principles
Postexposure Prophylaxis MMRW 2001; of Infectious Disease. 5th Ed. Churchill Livingstone
50(RR11);1-42. Inc. Nueva York, EE.UU. (WB Saunders Company,
Elsevier Science). 2000: 1500-19.

407
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VII

Manejo de la exposición ocupacional a patógenos


transmitidos por sangre

Guillermo Prada, MD
Jefe Sección de Infectologia
Fundación Santa Fe de Bogotá

Lucas Andrés Salas Díaz, MD


Hospital Centro Oriente II Nivel
Secretaría Distrital de Salud
Bogotá

E l concepto de exposición ocupacional fue


subestimado en el ámbito médico por mu-
chos años. La exposición a secreciones o san-
EXPOSICIÓN
Y PERSONAL EXPUESTO
gre del paciente se consideraba como parte Se incluye en este grupo a contratistas, estu-
de la práctica normal; sin embargo, con la apa- diantes, médicos hospitalarios, personal de
rición del virus de inmunodeficiencia humana planta, voluntarios, etc. que en algún momento
(VIH) en la década del 80 y el posterior reporte deban entrar en contacto con líquidos o secre-
de infección en trabajadores de la salud, co- ciones del paciente, bien sea directamente o
menzó una alarma mundial con la cual, no sólo por manipulación de material contaminado con
se encontró transmisión de VIH, sino de otra secreciones de los pacientes (personal de la-
serie de patógenos, como el virus de la hepa- boratorio y personal de aseo).
titis B (VHB) y el virus de la hepatitis C (VHC).
Se considera como exposición el accidente
Esta guía sólo manejará los conceptos gene- ocurrido con agujas o elementos cortantes,
rales y el manejo de exposición ocupacional que implique pérdida de la integridad de la
a los patógenos transmitidos por sangre más barrera cutánea (exposición percutánea), ino-
comunes y que causan mayor morbimortali- culación directa en mucosas de material con-
dad. El manejo de exposición ocupacional a taminado (exposición por salpicadura), o bien
otros patógenos transmitidos por mecanismos la exposición de piel no intacta a líquidos con-
diferentes (tuberculosis, N. meningitidis, etc.), taminados. En caso de exposición directa a
deberán consultarse en la sección respectiva virus en cultivos de laboratorio, se debe consi-
de las guías de urgencias. derar como caso expuesto. En mordeduras
humanas, se debe evaluar el estado de porta-
dor del atacante antes de iniciar cualquier es-
quema profiláctico, adicional a las medidas
usuales.

1096
CAPÍTULO VII: MANEJO DE LA EXPOSICIÓN OCUPACIONAL A PATÓGENOS TRANSMITIDOS POR SANGRE

La notificación y el inicio de esquemas profi- jos de anticuerpos contra el antígeno de su-


lácticos debe ser inmediato, idealmente en las perficie, debe recibir una dosis de refuerzo y
primeras dos horas después de la exposición. tomarse nuevos títulos.

Todo paciente HBsAg (+) debe considerarse


MANEJO DE LA EXPOSICIÓN como posible transmisor; sin embargo, el
OCUPACIONAL A HBV riesgo derivado de transmisión a partir de un
paciente positivo para este antígeno es sólo
El virus de la hepatitis B (HBV) es un virus de 1%-6%, en contaminación severa. La ma-
DNA de la familia Hepadnaviridae, con tropis- yoría de las veces, el virus latente libera antí-
mo específico por el hígado, aunque puede genos de superficie sin contenido viral a la san-
reproducirse en algunos otros tejidos en al- gre del individuo infectado; sin embargo,
gún momento de la infección. cuando existe la presencia concomitante de
HBeAg (+), el riesgo de seroconversión au-
Las complicaciones de la infección incluyen menta a 22%-31% en personas no vacuna-
el desarrollo de hepatitis aguda y crónica, en das. Se encuentra respuesta antigénica has-
muy pocos casos hepatitis aguda fulminante, ta en 62% de los expuestos.
la coinfección por hepatitis delta (endémica
en algunas áreas de Colombia), y el desarro- En caso de exposición, se debe solicitar au-
llo de cirrosis y hepatocarcinoma a largo torización para procesar una muestra de san-
plazo. gre del paciente fuente en busca de HBsAg;
asímismo se debe tomar una muestra del tra-
La transmisión se realiza a través de conta- bajador expuesto, solicitar información sobre
minación directa con sangre, o contacto sexual el estado de inmunización de éste, así como
con un portador; existe el riesgo de transmi- títulos cuantitativos de anticuerpos contra
sión vertical de madre a hijo, de acuerdo al HBsAg (Anti-HBs).
estado de replicación del virus en el momen-
to del parto. Si el trabajador tiene títulos superiores a 10
UI/mL no requiere tratamiento adicional. En
El virus posee varios antígenos en su estruc- caso de títulos inferiores, o de esquema de
tura: el antígeno e (HBeAg) marca la activi- inmunización incompleto, debe recibir inmuno-
dad replicativa del virión y la infectividad del globulina contra hepatitis B (HBIG) 0,06 mL/
portador, el antígeno s (HBsAg) marca la pre- kg IM en dosis única, y aplicar una dosis de
sencia de la infección, activa o nó, y es contra vacuna recombinante como refuerzo o como
el cual se dirigen los anticuerpos vacunales dosis de inicio del esquema, según sea el
en los individuos inmunizados o expuestos a caso. La inmunoglobulina y la vacuna deben
la infección. aplicarse en sitios anatómicos diferentes.

Como norma, todo personal de la salud debe Si se trata de una trabajadora embarazada,
haber recibido inmunización completa con tres se debe aplicar el mismo esquema. Por tra-
dosis de vacuna recombinante contra hepati- tarse de una vacuna recombinante no hay ries-
tis B, y tener títulos de anticuerpos circulan- go teórico de teratogénesis; y el seguimiento
tes protectores al momento de ingresar a cual- en mujeres embarazadas no ha mostrado nin-
quier institución. En caso de tener títulos ba- gún riesgo asociado.

1097
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Si el paciente es HBsAg (-) no se requiere tra- sor de la aguja, profundidad de la lesión,


tamiento; en caso de no tener esquema de sangrado en el sitio de punción, volumen
inmunización, éste debe ser iniciado o com- inyectado; si hay salpicaduras se evalúa
pletado. el sitio, el volumen y la duración del con-
tacto; cuando se trata de piel no intacta
En Colombia se estimó en 1997 que hasta 1% se averiguará sobre la presencia de ec-
de los trabajadores de la salud eran portado- zema, quemadura, ampolla o laceracio-
res del HBV y, según el área geográfica los nes.
índices estaban entre 0,5 a 1%. En Bogotá se B. Fuente de los líquidos/secreciones: de-
estima que 0,75% de los trabajadores son berán clasificarse de acuerdo con el ries-
portadores. Sólo a través de medidas preven- go de transmisión. Sangre, líquidos san-
tivas, como las anteriores, y el uso de las pre- guinolentos, semen, líquidos vaginales,
cauciones universales se logrará evitar la apa- materiales concentrados de VIH en la-
rición de casos nuevos. boratorios son de riesgo elevado; líqui-
do pleural, LCR, peritoneal, sinovial,
pericárdico y amniótico son sospecho-
MANEJO DE LA EXPOSICIÓN sos, mientras que las heces, vómito, ori-
OCUPACIONAL A VIH na, saliva, sudor, y lágrimas son de ries-
go dudoso.
A pesar de ser la menos transmisible dentro C. Individuo fuente: Indague sobre positivi-
de este grupo de patologías, fue la infección dad para VIH, estado de la enfermedad,
por VIH la que desató pánico entre el grupo carga viral, células CD4, historia del tra-
de trabajadores hospitalarios y por la cual se tamiento antirretroviral, comportamien-
desarrollaron guías para el manejo de la ex- to sexual, drogadicción, historia de tras-
posición ocupacional a patógenos en sangre. fusiones, hemofílico. Solicite consenti-
miento para realizar pruebas para
El riesgo relativo de adquirir la infección por VIH,Hepatitis B y Hepatitis C.
lesión percutánea es de 0,3% y por salpica- III. Cuidado post-exposición:
dura a mucosas de 0,09%; sin embargo, el A. Consejería: manejo de la ansiedad, que
riesgo de transmisión percutánea es similar debe incluir sexo seguro, riesgos a otras
al de un coito anal receptivo; por tanto, no debe personas, información sobre VIH y resul-
subestimarse el riesgo en ningún accidente tado de las pruebas, información sobre
laboral. antirretrovirales cuando esté indicado.
B. Prueba de VIH: es indispensable una
I. Medidas inmediatas: lave la piel cuidado- prueba inicial para descartar infección
samente con agua y jabón. Los ojos deben previa en el trabajador de la salud (se
lavarse de manera abundante con salina incluirán hepatitis B y C). El individuo
estéril o agua limpia. La boca o la nariz se fuente debe probarse para VIH, Hepati-
deben lavar con agua limpia. tis B y Hepatitis C. Es ideal que la prue-
II. La evaluación de la severidad de la expo- ba inicial de VIH de la fuente se informe
sición debe ser extensa y cuidadosa (ideal- en la primeras dos horas con el fin de
mente realizada por un experto) y debe in- tomar la decisión sobre antirretrovirales
cluir: en el trabajador de la salud.
A. Naturaleza de la exposición: en el caso C. Profilaxis: las recomendaciones se ba-
de agujas incluye sitio de la injuria, gro- san en el nivel de exposición y el esta-

1098
CAPÍTULO VII: MANEJO DE LA EXPOSICIÓN OCUPACIONAL A PATÓGENOS TRANSMITIDOS POR SANGRE

do del paciente fuente. La profilaxis debe Caso 5. Paciente VIH +, enfermedad avanza-
iniciarse lo antes posible y se considera da, carga viral alta, CD4 bajas o infección pri-
una emergencia médica. Si el estatus maria, exposición de piel (integridad compro-
de la fuente se desconoce o la serología metida) o mucosas, a sangre o líquidos cor-
está pendiente deberá realizarse una porales potencialmente infectantes en gran
evaluación caso por caso o iniciar 2 cantidad (muchas gotas, gran salpicadura),
medicamentos mientras se aclara la si- durante varios minutos o más o exposición
tuación. Si el trabajador es una mujer percutánea con aguja roma: Zidovudina + La-
embarazada se establecerá el riesgo vs. mivudina + Inhibidor de Proteasa por 28 días.
beneficio de la profilaxis caso por caso.
Caso 6. Paciente VIH +, carga viral baja, CD4
RECOMENDACIONES: altas o con enfermedad avanzada (carga viral
alta, CD4 bajas) o infección primaria, con ex-
Caso 1. Paciente VIH +, exposición de piel posición percutánea con aguja hueca de gran
intacta a sangre o líquidos corporales poten- calibre usada recientemente en arteria o vena,
cialmente infectantes, en poca cantidad, por punción profunda y sangre visible en el ins-
un período corto de tiempo: no requiere profi- trumento: Zidovudina + Lamivudina + Inhibidor
laxis. de Proteasa por 28 días.

Caso 2. Paciente VIH +, carga viral baja, Caso 7. Estatus del paciente fuente desco-
asintomático o CD4 altas, exposición de piel nocido o si las circunstancias sugieren riesgo
(integridad comprometida) o mucosas, a san- posible de VIH, exposición de piel (integridad
gre o líquidos corporales potencialmente infec- comprometida) o mucosas a sangre o líqui-
tantes, en poca cantidad (unas gotas), por un dos corporales potencialmente infectantes en
período corto de tiempo: no requiere profilaxis gran cantidad (muchas gotas o gran salpica-
(el riesgo/beneficio debe discutirse entre el dura), durante varios minutos o más o expo-
médico y el trabajador de la salud). sición percutánea de cualquier tipo: Zidovu-
dina + Lamivudina + Inhibidor de Proteasa por
Caso 3. Paciente VIH +, enfermedad avanza- 28 días.
da, carga viral alta, CD4 bajas o infección pri-
maria, exposición de piel (integridad compro-
metida) o mucosas, a sangre, líquidos corpo- MANEJO DE LA EXPOSICIÓN
rales potencialmente infectantes, en poca can- OCUPACIONAL A HCV
tidad (unas gotas), por un período corto de
tiempo: Zidovudina + Lamivudina por 28 días El riesgo de contaminación por accidentes con
(el riesgo/beneficio debe discutirse). aguja hueca es cercano a 3%. No hay benefi-
cio con el uso de inmunoglobulina, interferón
Caso 4. Paciente VIH +, carga viral baja, o ribavirina en el trabajador, debido a que no
asintomático o CD4 altas, exposición de piel modifica la historia natural de la enfermedad.
(integridad comprometida) o mucosas, a san-
gre o líquidos corporales potencialmente Ante la ausencia de profilaxis post-exposición
infectantes en gran cantidad (muchas gotas, las recomendaciones se restringen a lograr
gran salpicadura) durante varios minutos o una identificación temprana de la enfermedad
más o exposición superficial con aguja roma: y si se documenta, el paciente deberá referir-
Zidovudina + Lamivudina por 28 días. se para evaluación y tratamiento. Algunos

1099
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

estudios han demostrado que un curso corto workers after percutaneous exposure. N Engl J
de interferón iniciado de forma temprana en Med 1997; 337: 1485-90.
el curso de una hepatitis C aguda, se asocia 3. Centers for Disease Control and Prevention
(CDC). Perspectives in disease prevention and
con una tasa más alta de resolución de la en-
health promotion update: universal precautions for
fermedad, cuando se le compara con el que prevention of transmission of human immunode-
se inicia cuando la enfermedad está ya ple- ficiency virus, hepatitis B Virus, and other Blood-
namente establecida. Deberá considerarse, borne Pathogens in Health-Care Settings. MMRW
sin embargo, que 15-25% de los pacientes con 1988; 37:377-89.
infección aguda resuelven espontáneamente 4. Centers for Disease Control and Prevention
su infección, por lo que el tratamiento de es- (CDC). Serious adverse events attributed to nevi-
tos pacientes los expondría innecesariamen- rapine regimens for postexposure prophylaxis after
HIV exposures — worldwide, 1997–2000. MMWR
te a los efectos adversos y a las incomodida-
2001;49:1153-6.
des de la terapia antiviral. 5. Centers for Disease Control and Prevention
(CDC). Updated U.S. Public Health Service guide-
La infección por otros agentes bacterianos y lines for the management of occupational expo-
parasitarios debe tratarse de acuerdo con las sures to HBV, HCV, and HIV and recommendations
recomendaciones del comité de infecciones for postexposure prophylaxis. MMWR 2001;
de cada hospital. En Colombia hay riesgo de 50(RR-11):1-52.
6. Cherry N. Occupational disease. BMJ 1999;
transmisión de sífilis, enfermedad de Chagas
318:1397–9.
y malaria. 7. Gamester CF, Tilzey AJ, Banatvala JE. Medical
students’ risk of infection with blood borne viruses
Cada caso en particular debe intervenirse en at home and abroad: questionnaire survey. 1999;
conjunto con las directivas locales de los de- 318:158–60.
partamentos de urgencias y medicina ocupa- 8. Gerberding JL. Management of occupational
cional de cada institución. exposures to blood-borne viruses. N Engl J Med
1995; 332:444-451.
9. Gerberding JL. Occupational exposure to HIV in health
care settings. N Engl J Med 2003; 348:826-33.
LECTURAS RECOMENDADAS 10. Goodnough CP, Tanzman ES, Manchester RA.
Risks to health care workers in developing
1. Acta Médica Colombiana. Hepatitis B. Perspecti- countries. N Engl J Med 2001; 345: 1916.
vas reales de control a corto plazo. Acta Médica 11. HIV/AIDS Clinical Trials Information Service. U.S.
Colombiana En: http://www.actamedica.com/ Public Health Service Task Force recommenda-
articulos/a60740062.htm 1997 (marzo/abril). tions for the use of antiretroviral drugs in pregnant
2. Cardo DM, Culver DH, Ciesielski CA. A case–con- HIV-1-infected women for maternal health and
trol study of HIV seroconversion in health care interventions to reduce perinatal HIV-1 transmi-
ssion in the United States. August 2002. (En: http:/
/www.aidsinfo.nih.gov/document/data/guide-
lines_html_lib/perinatal-083002.html).

1100
CAPÍTULO VII: MANEJO DE LA EXPOSICIÓN OCUPACIONAL A PATÓGENOS TRANSMITIDOS POR SANGRE

CAPÍTULO VIII

Malaria grave y complicada

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales - FEPAFEM
Bogotá

E l paludismo o malaria es una de las en-


fermedades más devastadoras de Colom-
bia. Se calcula que anualmente enferman 500
duos con malaria severa y complicada se en-
cuentran:

millones de personas en el mundo, de las cua- • Malaria cerebral.


les mueren alrededor de ocho millones. En su • Anemia severa (hematocrito <15% o he-
forma más grave, la malaria ocasiona una ele- moglobina <5 g/dL).
vada tasa de mortalidad, especialmente en- • Insuficiencia renal.
tre los jóvenes, y todavía constituye a nivel • Hipoglicemia (<40 mg/dL).
global una de las causas principales de de- • Trastornos hidroelectrolíticos y del equili-
función en la infancia. brio ácido-base.
• Edema pulmonar y síndrome de dificultad
Colombia, con 206.917 casos de malaria en respiratoria del adulto (SDRA).
el año 2001, un incremento de 90,1% respec- • Colapso circulatorio y estado de shock.
to al año 2000, de acuerdo a cifras de la Or- • Hemorragias espontáneas o coagulación
ganización Panamericana de la Salud, no pue- intravascular diseminada (CID).
de desconocer la importancia de los avances • Hiperpirexia (>40,5°C).
en el manejo de la enfermedad (OMS, 2001). • Hiperparasitemia (>50.000 parásitos/mm 3;
es posible ver esquizontes).
La malaria severa o complicada aparece en • Hemoglobinuria malárica.
la mayoría de las ocasiones cuando el diag- • Complicaciones hepáticas e ictericia.
nóstico y el tratamiento apropiado se han rea- • Insuficiencia respiratoria.
lizado de manera tardía.

Esta guía se refiere al manejo de la malaria ETIOLOGÍA Y PATOGÉNESIS


grave y complicada, y no cubre el tratamiento
de las formas no complicadas. El paludismo es causado por protozoarios
pertenecientes al género Plasmodium. Cua-
tro especies del género son parásitos en el
DEFINICIÓN ser humano: P. vivax, P. malariae, P. ovale y
P. falciparum.
Malaria severa es la producida por Plasmo-
dium falciparum. El cuadro clínico se asocia Los esporozoitos del microorganismo entran
con obnubilación, estupor, debilidad extrema, al huésped humano a través de la picadura
convulsiones, vómito, ictericia y diarrea. En- de la hembra infectada del mosquito Anophe-
tre las complicaciones que exhiben los indivi- les y llegan al hígado, donde se reproducen

1101
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

en las células parenquimatosas (fase pre-eri- nientes de zonas endémicas y que cursan con
trocitaria). La progenie de los parásitos rompe una enfermedad febril.
los hepatocitos e invade los glóbulos rojos (fa-
se eritrocítica) para metabolizar la fracción pro- Se fundamenta en dos aspectos:
teica de la hemoglobina y madurar de trofo- 1. Procedencia de una zona geográfica en-
zoito a merozoito, proceso denominado esqui- démica.
zogonia. Los ciclos de reproducción intracor- 2. Identificación de los microorganismos en
puscular, ruptura y reinvasión son los respon- frotis de sangre periférica teñidos de ma-
sables de los episodios de escalofríos y fiebre. nera adecuada.

La parasitemia por encima de 100.000/mm 3


MANIFESTACIONES CLÍNICAS (2% de eritrocitos parasitados en recuentos
normales de sangre) indica enfermedad se-
En la siguiente tabla se observan las manifes- vera y requiere tratamiento urgente.
taciones clínicas más frecuentes de la enfer-
medad: Son factores pronósticos asociados con mor-
talidad aumentada los siguientes:
Signos y síntomas Porcentaje • Parasitemia >50.000 parásitos/µL ó 1%.
Fiebre 95 • Leucocitosis periférica > 12.000/µL.
Vómito 58 • Hematocrito <20%.
Escalofrío 48 • Hemoglobina <7,1 g/dL.
Sudoración 37 • Glicemia <40 mg/dL.
Diarrea 27 • Glucorraquia baja.
Trastornos de conducta 13 • Creatinina >3 mg/dL.
Convulsiones 9
• Aumento del ácido láctico en el LCR
Coma 2
(>6mmol/litro).
Hematuria 8
Oliguria 4 • Aumento de las enzimas séricas (amino-
Poliuria 2 transferasas) a más del triple.
Anuria 2 • Trombocitopenia.
Ictericia 21 Durante los dos o tres primeros días de trata-
Hepatomegalia 15 miento es conveniente medir la parasitemia
Petequias 2 cada cuatro o seis horas. Con cualquier grado
Epistaxis 2
de parasitemia el pronóstico empeora cuan-
Equimosis 0,5
do se encuentran un mayor porcentaje de for-
Adaptado de González L, Guzmán M, Carmona J, et al. mas maduras en los extendidos de sangre.
Características clínico epidemiológicas de 291 pacientes En general se considera que cuando existen
hospitalizados por malaria en Medellín. Acta Med Colomb más de 20% de parásitos en forma de esqui-
2000; 25: 163-170
zontes el pronóstico es malo.

DIAGNÓSTICO TRATAMIENTO
El elemento más importante para establecer La terapia del paciente con malaria grave y
el diagnóstico de malaria es mantener un alto complicada incluye el manejo de enfermería
índice de sospecha frente a pacientes prove- y el tratamiento médico inmediato.

1102
CAPÍTULO VIII: MALARIA GRAVE Y COMPLICADA

Manejo de enfermería. Se fundamenta en la lución salina normal para pasar en cuatro


valoración e identificación de: horas. Doce horas después de empezar la
• Alteración del estado de conciencia. dosis de carga se continúa con 10 mg/kg
• Alteración en la eliminación urinaria. de quinina. Esta dosis se mantiene cada
• Déficit en el volumen de líquidos. 12 horas hasta que el paciente puede in-
• Cambios en la temperatura corporal. gerir tabletas. La dosis por vía oral es 10
• Dolor. mg/kg. El tratamiento se mantiene hasta
• Presencia de convulsiones. completar siete días.

Las acciones están encaminadas a:


• Comprobar la glucemia. LECTURAS RECOMENDADAS
• Iniciar hidratación por vía parenteral.
• Evaluar cada dos horas el estado de 1. Baird JK, Lacy MD, Basri H, et al. Randomized,
hidratación. parallel placebo-controlled trial of primaquine for
• Informar al médico si la eliminación urina- malaria prophylaxis in Papua, Indonesia. Clin
Infect Dis 2001; 33:1990-7.
ria es igual o inferior a 50 mL/hora.
2. González I, Padilla JC, Giraldo LE, Saravia N. Efi-
• Cambio de posición del paciente cada dos cacia de amodiaquina y sulfadoxina/pirimetamina
horas. en el tratamiento de malaria no complicada por
• Administrar los medicamentos formulados Plasmodium falciparum en Nariño, Colombia.
por el médico. Biomédica 2003; 203:38-46.
• Observar signo de toxicidad por los medi- 3. González L, Guzmán M, Carmona J, et al. Carac-
camentos. terísticas clínico epidemiológicas de 291 pacien-
• Control de signos vitales. tes hospitalizados por malaria en Medellín. Acta
Med Colomb 2000; 25:163-170.
4. Graves P, Gelband H. Vaccines for preventing
Tratamiento Médico malaria. Cochrane Database Syst Rev. 2003
• Iniciar tratamiento farmacológico ;(1):CD000129.
intravenoso. 5. Krishna S. Malaria. En: Conn´s Current Therapy
• Hospitalizar si es posible en una unidad de 2003. Edited by RR Rakel and ET Bope. Saunders.
cuidado intensivo. Philadelphia, 2003.
• Evaluar la presencia de posibles compli- 6. Lacy MD, Maguire JD, Barcus MJ, et al.
caciones e iniciar su tratamiento. Atovaquone/proguanil therapy for Plasmodium
falciparum and Plasmodium vivax malaria in
Indonesians who lack clinical immunity. Clin Infect
El manejo se hace de la siguiente forma: Dis 2002; 35:92-5.
1. Adultos: quinina 20 mg/kg de peso en do- 7. Lesi A, Meremikwu M. High first dose quinine
sis inicial diluida en 10 mL/kg de peso de regimen for treating severe malaria. Cochrane
solución salina normal para pasar en cua- Database Syst Rev. 2002 ;( 3):CD003341.
tro horas. Ocho horas después de empe- 8. Lopera WD, Restrepo M. Malaria. En: Manual de
zar la dosis de carga se continúa con 10 Terapéutica 2002. Editado por MA González, WD
mg/kg de quinina. Esta dosis se mantiene Lopera y A Arango. Corporación para Investiga-
ciones Biológicas. Medellín, 2002.
cada ocho horas hasta cuando el paciente
9. Ling J, Baird JK, Fryauff DJ, et al. Randomized,
puede ingerir tabletas. La dosis por vía oral placebo-controlled trial of atovaquone/proguanil for
es 10 mg/kg. El tratamiento se mantiene the prevention of Plasmodium falciparum or
hasta completar siete días. Plasmodium vivax malaria among migrants to
2. Niños: quinina 20 mg/kg de peso en dosis Papua, Indonesia. Clin Infect Dis 2002; 35:825-
inicial diluida en 10 mL/kg de peso de so- 33.

1103
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

10. Londoño B, Cardona M, Blair S. Comparación de 13. Organización Panamericana de la Salud. Informe
los métodos Optimal y gota gruesa para el diag- de la situación de los programas regionales de
nóstico de malaria en una zona endémica sin epi- malaria en las Américas. http://www.paho.org/
demia. Biomédica 2002; 22: 466-75. Spanish/HCP/HCT/MAL/programas-
11. McIntosh HM. Chloroquine or amodiaquine nacionales.pdf (visitado Junio 6/03)
combined with sulfadoxine-pyrimethamine for 12. van Vugt M, Leonardi E, Phaipun L, et al. Treat-
treating uncomplicated malaria. Cochrane ment of uncomplicated multidrug-resistant
Database Syst Rev 2001;(4):CD000386. falciparum malaria with artesunate-atovaquone-
12. Moore DA, Jennings RM, Doherty TF, et al. proguanil. Clin Infect Dis 2002; 35:1498-504.
Assessing the severity of malaria. BMJ 2003;
326:808-9.

1104
CAPÍTULO VIII: MALARIA GRAVE Y COMPLICADA

CAPÍTULO IX

Mordeduras por animales

Lucas Andrés Salas, MD


Hospital Centro Oriente
Bogotá

Guillermo Prada, MD
Jefe, Sección de Infectología
Departamento de Medicina Interna
Fundación Santa Fe de Bogotá

L as mordeduras son traumatismos de la su-


perficie cutánea causados por los dientes
de un animal o de un ser humano; el mecanis-
(doberman, rottweiler, fila brasilero, pitbull,
etc.), se puede considerar que las lesiones
producidas por perros y gatos son general-
mo es el de una lesión cortocontudente, pero mente accidentes provocados al invadir el te-
de acuerdo con la especie agresora, las le- rritorio del animal o molestarlo. La costumbre
siones pueden incluir laceraciones, punciones, de acariciar perros desconocidos o de ‘jugar’
o avulsiones. En la práctica clínica las lesio- mientras estos comen, el ingresar a un jardín
nes producidas por las uñas o el pico de un o pasar por una calle desconocida custodia-
animal se incluyen dentro del espectro de las da por uno de estos animales, puede ser con-
“mordeduras” como accidentes con animales siderado por el animal como una agresión. Si
que tienen riesgo de infección. a esto agregamos la huida natural al sentir la
posibilidad de ataque, aumenta el riesgo de
Las mordeduras son motivo relativamente fre- la gravedad de las lesiones. En los gatos des-
cuente de consulta a los servicios de urgen- conocidos la posibilidad de mordedura no es
cias, y el personal de salud debe estar fami- tan alta pero generalmente se puede producir
liarizado con este tipo de accidentes. una lesión por arañazo.

Los perros grandes (que pesan más de 22 ki-


MORDEDURAS POR ANIMALES logramos) pueden poner en acción una fuer-
DOMÉSTICOS za mandibular hasta de 14 a 32 kg/cm 2, con
la cual pueden generar extensas avulsiones
La mayor parte de los accidentes ocurren con y fracturas. Según la talla de la víctima, las
perros y gatos, especies que son aceptadas lesiones se localizan en diferentes segmentos:
como animales de compañía y que son consi- en el adulto las lesiones tienden a concen-
deradas como de baja peligrosidad. Con trarse en miembros superiores (al defenderse
excepción de algunos hechos aislados con ra- de un ataque o al alimentar el animal) o miem-
zas de perros de alta peligrosidad y cuya te- bros inferiores (al huir del animal); en los niños
nencia es prohibida por algunas legislaciones las lesiones predominan en cara y cuello y en

1105
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

algunos casos en los miembros superiores. deyecciones de sus víctimas, generalmente


Según el sitio comprometido y el tamaño del ratones, en el momento de ser ingeridas; la
animal, hay mayor o menor avulsión de los prioridad es determinar la necesidad de trata-
tejidos con fracturas asociadas o sin ellas; en miento con el suero antiofídico. Si el veneno
lesiones grandes hay riesgo alto de hemorra- causa necrosis, el riesgo de infección aumenta
gia más que de infección; en niños pequeños gradualmente y se pueden necesitar desbrida-
puede peligrar la vida del paciente. miento y tratamiento con antibióticos. Ver la
guía Accidente Ofídico en esta misma serie.
La tasa de infección por mordedura de perro
no sobrepasa el 5% por el tipo de herida (am- Las ratas y ratones pueden producir la “fiebre
plia y muy vascularizada). Los pacientes tien- por mordedura de rata”, al transmitir especies
den a ser niños o personas menores de 20 de Spirillum minus y Streptobacillus monili-
años, generalmente no son dueños del animal. formis.

En los gatos la situación es diferente: cuando Los primates no humanos pueden trasmitir
la lesión es por mordedura, los dientes tienden Herpesvirus simiae, por lo que su mordedura
a dejar lesiones puntiformes, además de la requiere tratamiento empírico con aciclovir;
posibilidad de dejar parte de los dientes en la esas lesiones tienden a infectarse con mayor
herida; el riesgo de infección llega hasta el frecuencia pero la flora no es siempre la mis-
80%. Los pacientes tienden a ser mujeres o ma, por lo cual el tratamiento debe ser empí-
personas mayores de 20 años y usualmente rico, dirigido a los microorganismos comunes
son los dueños del animal. de otras heridas por mordeduras y de tal modo
que cubra también a microorganismos resis-
tentes hallados en cultivos.
MORDEDURA POR ANIMALES
SILVESTRES Y DE GRANJA
TRATAMIENTO
Cualquier animal puede ser un agresor en po-
tencia cuando es molestado en su habitat na- 1. Reanimación y estabilización del paciente
tural. Hay informes de ataques por animales en caso de hemorragia profusa.
silvestres carnívoros a seres humanos, pero 2. Interrogar al paciente sobre la situación en
son ataques previsibles que ocurren con el in- la cual ocurrió el accidente y si el animal fue
greso a áreas de reservas forestales sin tomar capturado o es conocido (en caso de acci-
las medidas de precaución indicadas; algunos dente rábico ver más adelante en esta guía).
casos son de veterinarios agredidos por ani- 3. Historia clínica con el fin de buscar datos
males poco sedados en zoológicos. La flora sobre posibles alergias a antibióticos, tra-
oral no cambia mucho aunque existen algunos tamiento con medicamentos citotóxicos o
microorganismos exóticos que deben tenerse inmunosupresores, antecedente de esple-
en cuenta para cada caso en particular (ver nectomía, o enfermedad hepática. En los
Tabla 1). pacientes con alergias severas a los beta-
lactámicos deberá consultarse a un exper-
La mordedura por serpientes (venenosas o no) to en enfermedades infecciosas.
tiene un riesgo moderado de infección, la flo- 4. Durante el examen físico describir clara-
ra predominante está formada por bacilos mente la forma y localización de la herida,
Gram negativos colónicos presentes en las demarcar los bordes eritematosos para

1106
CAPÍTULO IX: MORDEDURAS POR ANIMALES

TABLA 1. PATÓGENOS QUE SON INOCULADOS POR MORDEDURAS DE ANIMALES

Animal Patógenos
Animales domésticos, urbanos y de granja
Perro Pasteurella multocida subsp. multocida, P. canis, Staphylococcus intermedius, Capnocytophaga
canimorsus, Capnocytophaga spp., Capnocytophaga cynodegmi, Neisseria weaveri, Bacteroides tectum,
Prevotella heparinolytica, Prevotella zoogleoformans, Prevotella bivia, Porphyromonas salivosa,
Porphyromonas gingivalis, Porphyromonas canoris, Fusobacterium spp., Peptostreptococcus spp, otros.
Gato Pasteurella multocida subsp. septica, Haemophilus felis, Neisseria canis, Bacteroides tectum, Prevotella
heparinolytica, Prevotella zoogleoformans, Prevotella bivia, Porphyromonas salivosa, Porphyromonas
gingivalis, Porphyromonas canoris, Fusobacterium spp., Peptostreptococcus spp, otros.
Caballo Actinobacillus lignieresii, Actinobacillus equi-like
Rata Streptobacillus moniliformis, Spirillum minus, Leptospira interrogans, Pasteurella multocida,
Staphylococcus spp. coagulasa-negativos
Cerdo Francisella tularensis, Pasteurella multocida, Streptococcus agalactiae, Streptococcus milleri,
Streptococcus equisimilis,Proteus sp., E. coli, Bacteroides sp, Flavobacterium IIb-like.
Gallo Streptococcus bovis, Clostridium tertium, Aspergillus niger
Hamster Acinetobacter anitratus
Animales silvestres carnívoros
Coyote Francisella tularensis
Puma Pasteurella multocida
León Pasteurella multocida, Staphylococcus aureus, E. coli
Pantera Pasteurella multocida
Tigre Pasteurella multocida, Acinetobacter, E. coli, streptococci, staphylococci, diphtheroids
Lobo Pasteurella multocida
Otros animales de bosque, desierto y selva
Serpientes Pseudomonas spp., Enterobacterias, Staphylococcus epidermidis, Clostridium spp.
Ardilla Francisella tularensis
Conejos Francisella tularensis
Liebres Francisella tularensis
Fauna marina y de río
Piraña Aeromonas hydrophila
Cocodrilo Aeromonas hydrophila, Citrobacter diversus, Enterobacter agglomerans, Pseudomonas y Serratia spp.
Coral (cortes Aeromonas hydrophila, Bacteroides fragilis, Chromobacterium violaceum, Clostridium perfringens,
o punción) Erysipelothrix rhusopathiae, Escherichia coli, Mycobacterium marinum, Pseudomonas aeruginosa,
Salmonella spp., Staphylococcus aureus, Streptococcus spp., Vibrio vulnificus, Vibrio parahemolyticus,
Vibrio spp.
Tiburón Vibrio carachariae

1107
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

permitir un buen control en el seguimiento y tétanos (ver las guías respectivas en esta
y en lo posible dibujar en la historia clínica misma serie). Los bordes de las heridas no
un diagrama de las lesiones. Si existe pe- deformantes en cara y las lineales pueden
netración evidente hasta tendones, huesos aproximarse con cintas adhesivas.
o articulaciones, tomar las radiografías in- 8. Se debe usar tratamiento antibiótico en
dicadas según la ubicación de la lesión y toda lesión producida menos de ocho ho-
consultar a un médico especialista para el ras antes, en lesiones de manos o genita-
tratamiento de las lesiones secundarias y les, si el paciente se halla inmunocompro-
la prevención del alto riesgo de artritis sép- metido, o en lesión cercana a prótesis arti-
tica y osteomielitis por Pasteurella multoci- cular. De acuerdo con la microbiología ano-
da y otros microorganismos. Si los hay, de- tada arriba, los accidentes con animales
ben anotarse el compromiso nervioso y la carnívoros u omnívoros (incluyendo los
limitación del rango de movimiento articular. domésticos) suelen tener contaminación
5. Si hay signos francos de infección se debe con un espectro de microorganismos que
tomar muestra del exudado para examen incluye Staphylococcus coagulasa positi-
con coloración de Gram y cultivo, aclarando vo, Pasteurella multocida (incluyendo las
la necesidad de cultivo para anaerobios y si subespecies) y anaerobios (incluyendo
es el caso la sospecha de Capnocytopha- Bacteroides spp.). El tratamiento de elec-
ga, ya que para el crecimiento de estos ción es una aminopenicilina con inhibidor
microorganismos, el cultivo debe cumplir re- de betalactamasa y la primera opción es
querimientos especiales. Ante un Staphylo- amoxicilina/ácido clavulánico 500/125 mg
coccus coagulasa positivo se debe pensar por vía oral cada ocho horas por 7-10 días
en S. intermedius y no sólo en S. aureus. para el paciente ambulatorio; en caso de
6. El tratamiento corriente de la herida inclu- requerir hospitalización ampicilina/sulbac-
ye limpieza, desbridamiento y control de la tam 1,5 g IV cada 6 horas o cefoxitina 2,0
hemorragia; en lesiones puntiformes se g IV cada ocho horas. En el paciente alér-
puede usar chorro de irrigación con jeringa gico a betalactámicos la combinación de
de 20 ó 50 mL y aguja 18Fr, retirando teji- clindamicina más ciprofloxacina es la op-
do desvitalizado y cuerpos extraños; no se ción de preferencia en los adultos, tanto
recomienda explorar heridas pequeñas, ex- por vía oral como intravenosa; en los niños
cepto para drenar abscesos ya formados. se puede usar trimetoprim/sulfametoxazol
7. El cierre de toda herida contaminada debe en lugar de quinolonas.
realizarse por segunda intención, permi- 9. El paciente con signos de respuesta infla-
tiendo el drenaje de exudados; posterior- matoria sistémica severa debe ser hospi-
mente se realizará la limpieza quirúrgica si talizado, así como el que requiera trata-
es necesaria; las únicas heridas que pue- miento para lesiones secundarias (fractu-
den ser suturadas son las heridas defor- ras, artritis séptica y osteomielitis).
mantes en cara, haciendo la salvedad de 10. Se debe realizar profilaxis antitetánica de
que deberán ser exploradas si aparecen acuerdo con la historia de inmunización, se-
luego signos de infección. Las otras heri- gún el esquema que aparece en la guía
das deben lavarse y cubrirse con apósitos Tétanos en esta misma serie y profilaxis
limpios, realizar curaciones diarias (las cua- antirrábica. (ver más adelante).
les pueden efectuarse en casa del herido). 11. Recomendaciones generales: mantener
Siempre debe tenerse en cuenta la posibi- elevado el miembro para disminuir el ede-
lidad de fascitis necrotizante, mionecrosis ma, inmovilización en posición anatómica.

1108
CAPÍTULO IX: MORDEDURAS POR ANIMALES

12. Seguimiento a las 48 horas para determi- Los accidentes en el océano no requieren cu-
nar evolución de la herida. brimiento especial a menos que exista inmu-
13. Los accidentes rábicos son de notificación nocompromiso (hepatopatía) previo, el uso de
obligatoria a las autoridades de salud. ciprofloxacina en las dosis anotadas arriba junto
con el manejo convencional, cubre Vibrio spp.,
La enfermedad por arañazo de gato (Barto- pero si el paciente ingresa en shock séptico el
nella henselae) es una linfadenitis regional que tratamiento debe hacerse con cefalosporinas
puede aparecer en quienes tienen contacto de tercera o cuarta generación más doxiciclina.
con gatos, se presenta en pacientes inmuno-
competentes y cursa de manera autolimitada
por 2 a 6 semanas; sin embargo, las lesiones ACCIDENTE RÁBICO
muy sintomáticas pueden requerir antibióticos
pero su eficacia es puesta en duda por algu- Se considera como accidente posiblemente
nos estudios. El esquema de tratamiento in- rábico cualquier mordedura de mamífero car-
cluye azitromicina 500 mg por vía oral (día 1) nívoro o hematófago. Los Rhabdoviridae tie-
y luego 250 mg/día VO durante cuatro días nen dos géneros que infectan animales:
más. En ocasiones las lesiones han requeri- Lyssavirus y Vesiculovirus. Todos los mamí-
do drenaje quirúrgico o por punción (consulte feros pueden adquirir el virus pero sólo los
con un experto para descartar otras causas Carnívora y los Chiroptera son reservorios con
de linfadenitis regional, incluyendo mico- potencial transmisión entre especies. Dentro
bacterias). de las especies reconocidas como posibles
transmisores están perros, gatos, mapaches,
Los accidentes con fauna marina y de río re- zorros grises y rojos, lobos, mofetas, coyotes,
quieren tratamiento especial para cubrir Aero- chacales y murciélagos de pecho plateado (y
monas spp. (A. hydrophila comúnmente) tan- en general cualquier murciélago vampiro).
to en accidentes en agua dulce como en agua
salada, y Vibrio spp. en accidentes en agua Otros animales, como los roedores y lago-
salada; en pacientes inmunocomprometidos morfos, aunque pueden infectarse, no son
existe la posibilidad de sepsis por V. vulnificus buenos hospederos para el virus, por lo cual
y V. damsela, lesiones bullosas hemorrágicas, las mordeduras de ratas, ratones, hamsters,
shock séptico y muerte. Los vibrios pueden conejos y ardillas no deben tratarse como ac-
producir fascitis necrotizantes, como se des- cidentes rábicos.
cribe en la respectiva guía de esta misma se-
rie. El tratamiento contra Aeromonas y Pseu- La secuencia ante un accidente rábico poten-
domonas en paciente sin compromiso sistémi- cial incluye todas las medidas expuestas arri-
co se puede realizar usando fluoroquinolonas ba, el interrogatorio y tratamiento local inclu-
como parte del tratamiento anotado arriba; se yendo antibióticoterapia convencional, y ade-
prefiere ciprofloxacina 750 mg por vía oral ca- más lo siguiente:
da doce horas, o 400 mg IV cada doce horas,
por su espectro contra Gram negativos; pero 1. Si se trata de un animal doméstico, locali-
según la resistencia in vitro puede usarse cual- zar al dueño y solicitar registros escritos
quier sustancia de generaciones superiores; de vacunación del animal, o certificación
en caso de shock séptico se requiere trata- por un veterinario autorizado.
miento hospitalario con aminoglicósido 2. Si el animal no ha sido vacunado debe ser
antipseudomonas o carbapenem. puesto en observación por 10 días en el

1109
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

centro de zoonosis de la ciudad o región; camadas de piel periungueales con los dien-
si existe posibilidad de seguimiento domi- tes, puede presentarse paroniquia y absce-
ciliario en asilamiento en el lugar de habita- sos periungueales que deben ser drenados,
ción del dueño, puede permitirse; si el ani- y que a veces son tan severos que pueden
mal enferma gravemente, presenta cam- comprometer la uña. Es raro encontrar otras
bios de comportamiento o signos indirectos lesiones pero pueden presentarse lesiones en
como anisocoria, polifagia, sialorrea, tras- dedos por mordeduras de niños, o avulsiones
tornos de la marcha (evaluados por un ve- por mordeduras intencionales durante una
terinario) debe ser sacrificado y estudiado pelea (por ejemplo, avulsiones del cartílago
para rabia y se debe iniciar profilaxis post- auricular en boxeadores).
exposición.
3. Si el animal es salvaje y fue capturado, de- La flora oral humana sigue los mismos patro-
be sacrificarse y enviarse para estudio com- nes de los otros animales; siempre se encon-
pleto o por lo menos el sistema nervioso trará Streptococcus viridans (S. mutans y otras
central en hielo al instituto de salud de re- especies productoras de caries en seres hu-
ferencia, e iniciar profilaxis post-exposición manos), stafilococo, difteroides, anaerobios
hasta descartar rabia. Si el animal huyó, (peptostreptococos, peptococos, fusobacterias,
debe iniciarse tratamiento post-exposición. veionella, bacteroides y Eikenella corrodens).
4. La mordedura de murciélago vampiro es
indolora, no sigue patrón convencional de Si el tratamiento se hace de manera tempra-
dos orificios y rara vez se observa más que na (sin evidencia de infección) puede usarse
una lesión puntiforme; si la zona es reco- amoxicilina clavulanato 500/125 mg cada ocho
nocida como área de estas especies, debe horas durante cinco días. Si es de forma tar-
iniciarse profilaxis. día, esto es con evidencia de infección, se
5. Se aplica inmunoglobulina humana hiper- usarán ampicilina sulbactam, cefoxitina o
inmune 20 UI/kg, la mayoría de la dosis en piperacilina/tazobactam. En caso de alergia a
el sitio del accidente y la cantidad restante la penicilina se recomiendan clindamicina más
por vía IM en la región glútea. ciprofloxacina o trimetroprim sulfametoxazol.
6. Vacunación con vacuna de células diploi-
des humanas o células Vero (renales de mo-
no) en días 0, 3, 7, 14, 28, se aplica 1 mL IM LECTURAS RECOMENDADAS
en deltoides o en muslo en niños pequeños
1. Center of Disease Control and prevention. Rabies.
(no se debe aplicar en los glúteos). MMRW. 1997; 46:770.
2. Center of Disease Control and prevention.
Tetanus. MMRW. 1997; 46 (SS-2):15.
MORDEDURAS HUMANAS 3. Choi E. Tick-Borne Diseases: Tularemia and Q
fever. Medical Clinics of North America 2002;
Se presentan generalmente en dos situacio- 86:393-416.
nes: por agresión intencional o durante una 4. Fishbein D, Robinson L. Rabies. NEJM1993;
329:1632-1638.
pelea en la que se produce lesión en los nudi-
5. Gibbons R. Cryptogenic rabies, bats, and the ques-
llos del atacante al golpear los dientes de la tion of aerosol transmission. Annals of Emergency
otra persona; en el segundo caso existe alto Medicine 2002; 39:528-536.
riesgo de tenosinovitis y artritis séptica. En 6. Glaser C, Lewis P, Wong S. Pet-, Animal-, and
niños o adolescentes que tienen la costumbre Vector-borne Infections. Pediatrics in Review 2000;
de chuparse los dedos o arrancarse áreas des- 21:219-232.

1110
CAPÍTULO IX: MORDEDURAS POR ANIMALES

7. Goldestein E. Bites. En: Principles and practice of 10. Moran GJ. Dogs, cats, raccoons, and bats: where
infectious diseases. Editado por Mandell. 5 edi- is the real risk for rabies? Ann Emerg Med 2002;
ción. Churchill Livingston. New York, 2000. 39:541-543.
8. Goldestein E. Human and animals bites. En: 11. Sellman J, Bender J. Zoonotic infections in
Current Therapy of Infectious Disease. Editado por travelers to the tropics. Primary Care; Clinics in
Shlossberg. 2nd edition. Mosby. St Louis, 2001. Office Practice 2002; 29:907.
9. Greenberg S. Environmental emergencies:
Serious waterborne and wilderness infections.
Critical Care Clinics1999; 15:318-414.

1111
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO X

Pielonefritis aguda

Nancy Yomayusa, MD
Coordinadora de Nefrología
Jefe del Departamento de Investigación Básica
Clínica Reina Sofía

Hernando Altahona, MD
Director Científico, Clínica Reina Sofía
Bogotá

DEFINICIÓN

L a pielonefritis aguda (PA) se define como


el proceso infeccioso que afecta la pelvis y
el parénquima renal y que se refleja en un cua-
cluidas otras condiciones como diabetes, insu-
ficiencia renal crónica, neutropenia, trasplante,
embarazo, edad avanzada y antecedentes de
dro clínico caracterizado por dolor lumbar, fie- inmunosupresión farmacológica. Los pacien-
bre y bacteriuria. El espectro de presentación tes con tales características tienen mayor ries-
clínica es muy amplio, concordante con la seve- go de infección, falla del tratamiento y resisten-
ridad de la enfermedad, la cual puede cursar cia a los antibióticos. La pielonefritis en los
como infección localizada o evolucionar a una hombres con un foco prostático, así como la
infección severa con los signos clásicos de res- pielonefritis recurrente, se consideran infec-
puesta inflamatoria sistémica o shock séptico. ciones complicadas.

PIELONEFRITIS NO COMPLICADA EPIDEMIOLOGÍA


Proceso infeccioso que ocurre en pacientes La PA es uno de los cuadros clínicos más fre-
sin alteraciones anatómicas o funcionales del cuentes en los servicios de urgencias, respon-
tracto urinario. sable de 3-5% de las consultas. En general la
mortalidad asociada es baja, excepto en los
casos de sepsis de origen urinario o shock
PIELONEFRITIS COMPLICADA séptico. Los factores de riesgo asociados con
pielonefritis aguda más relevantes son la co-
Se considera pielonefritis complicada todo existencia de patología urológica, como litia-
cuadro infeccioso que ocurre en pacientes con sis, y reflujo vesicoureteral. La litiasis urinaria
alteraciones estructurales o funcionales del predispone a pielonefritis, no sólo por el efec-
aparato urinario, tales como litiasis, malforma- to obstructivo y por la contribución al flujo re-
ciones congénitas, quistes, neoplasias, este- trógrado, sino por su capacidad de convertir-
nosis, catéteres ureterales. También están in- se en un reservorio de bacterias.

1112
CAPÍTULO X: PIELONEFRITIS AGUDA

Otros factores de riesgo importantes son las La infección por Proteus spp se observa con
alteraciones neurológicas como la vejiga neu- mayor frecuencia en ancianos, en pacientes
rogénica, los efectos nocivos del embarazo con sonda vesical permanente y en los pacien-
sobre el peristaltismo, así como patologías tes con antecedentes de litiasis por cálculos
subyacentes como la diabetes. La presencia coraliformes, debido a que este microorganis-
de un catéter uretral aumenta el riesgo de in- mo tiene la capacidad de producir ureasa, una
fección de las vías urinarias en 5% por día, enzima que desdobla la urea en amonio, alcali-
porque facilita el ascenso bacteriano a la pel- niza la orina y favorece la precipitación de sa-
vis y al parénquima del riñón. les de fosfato amónico-magnésico (estruvita)
y fosfato cálcico (apatita).

ETIOLOGÍA
FISIOPATOLOGÍA
La PA es causada en 80% de casos por la
Escherichia coli pielonefritogénica o uropató- La invasión de la pelvis renal puede originar-
gena, caracterizada por tener determinantes se de manera ascendente o por vía hemató-
específicos de virulencia que le permiten infec- gena desde focos infecciosos a distancia. Los
tar el tracto urinario superior. En los últimos microorganismos más frecuentemente involu-
años se han descrito en diversas partes del crados son: Staphylococcus aureus, Pseudo-
mundo cepas de E. coli y de Klebsiella spp monas aeruginosa, Salmonella spp, Mycobac-
resistentes, con capacidad de producir beta- teríum tuberculosis, Candida spp y otras mi-
lactamasas de espectro ampliado. cosis diseminadas.

En general la etiología de la PA puede variar El mecanismo más frecuente en la génesis


de acuerdo a las características de los pacien- de la PA es el ascenso de los microrganismos
tes y sus factores de riesgo. Los pacientes desde la vejiga hasta la pelvis renal a través
con antecedente de antibióticos previos por de los uréteres, gracias a diferentes condicio-
cursos prolongados se infectan principalmen- nes favorecedoras, dependientes tanto del mi-
te por enterobacterias multiresistentes, Pseu- croorganismo como del huésped, principal-
domonas aeruginosa, Enterococcus spp y mente relacionadas con los mecanismos de
Candida spp. Los pacientes con antecedente adherencia de los microrganismos al urotelio
de cirugía o de instrumentación de la vía uri- y la existencia de factores mecánicos, como
naria están predispuestos a infecciones por obstrucción del flujo urinario, trauma, reflujo
Staphylococcus aureus, Staphylococcus epi- vesicoureteral, disfunción vesical neurogénica
dermidis, Morganella spp., Providencia spp. y o la presencia de sonda vesical.
bacilos Gramnegativos no fermentadores di-
ferentes de P. aeruginosa, como Acinetobacter FACTORES DE DEFENSA DEL HUÉSPED
spp o Stenotrophomonas maltophilia. Entero-
coccus spp se aíslan especialmente en ancia- Una vez alcanzado el riñón, los microorganis-
nos con hipertrofia prostática, pacientes en mos producen infección de la médula y papilas
postoperatorio con sonda vesical permanen- renales, estructuras que resultan particular-
te y aquellos que han recibido profilaxis o tra- mente sensibles debido al pH ácido, elevada
tamiento con cefalosporinas. osmolaridad y escasa perfusión sanguínea.
Estas condiciones interfieren con varios meca-
nismos de defensa como la migración leuco-

1113
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

citaria, la fagocitosis y el sistema del comple- vantes son la alteración del estado de concien-
mento, y favorecen la invasión tisular por los cia y el dolor abdominal difuso.
uropatógenos. La susceptibilidad del riñón a
la infección no es uniforme. Un inóculo bacte-
riano pequeño es capaz de producir infección EVOLUCIÓN
medular, mientras que es preciso un número
de microorganismos 10.000 veces superior El curso clínico de la PA puede ser controlado
para infectar la corteza renal. con cinco días de manejo adecuado. La persis-
tencia de fiebre o el deterioro clínico en las
RESPUESTA INMUNE A LA INFECCIÓN siguientes 72 horas del comienzo del trata-
miento obliga a descartar las siguientes con-
Los estudios fisiopatológicos aportan eviden- diciones:
cia indirecta de una respuesta inmune inespe- • Infección por un microorganismo resisten-
cífica, local y sistémica, así como de una res- te al tratamiento.
puesta de tipo celular ante la colonización e • Absceso renal. El absceso intrarrenal corti-
invasión bacterianas, pero hasta el momento cal suele ser de origen hematógeno. El
no se ha podido dilucidar su función en la pre- agente etiológico en 90% de los casos es
vención de la infección de las vías urinarias el S. aureus. El absceso corticomedular es
(IVU). causado por los mismos uropatógenos que
han producido la PA. El absceso perinéfrico
Es indudable que la magnitud de la respuesta se origina en la ruptura de un absceso intra-
humoral sérica y urinaria es mayor en la pielo- renal al espacio perirrenal.
nefritis que en la cistitis, dado el menor com- • Patología obstructuva de las vías urinarias
promiso de las células inmunoreactivas en con pionefrosis.
este último proceso. • Pielonefritis enfisematosa. Se caracteriza
por destrucción tisular y producción de gas
en el parénquima renal, particularmente en
PRESENTACIÓN CLÍNICA pacientes diabéticos. El tratamiento incluye
drenaje percutáneo, o nefrectomía con
La PA tiene un espectro clínico que oscila entre carácter urgente en los casos de riñón no
las manifestaciones de un proceso localizado, funcionante. Cuando hay obstrucción con
cuyos principales síntomas son la fiebre y el riñón funcional se debe intentar tratamien-
dolor lumbar, hasta cuadros de sepsis o de to médico y drenaje mediante nefrostomía
shock séptico. Las manifestaciones clínicas percutánea o catéter ureteral.
más frecuentes son fiebre, escalofrío, dolor • Nefritis focal aguda. Se caracteriza por el
lumbar y síntomas urinarios bajos como disuria desarrollo de infiltrado leucocitario confina-
o polaquiuria. Los cuadros de fiebre y escalo- do a un lóbulo (focal) o a varios lóbulos
frío intenso pueden estar asociados a episo- (multifocal), constituyéndose en la altera-
dios de bacteremia, la cual ocurre en 20-30% ción precedente a la formación de un abs-
de los casos. ceso. Suele observarse en pacientes dia-
béticos, a menudo cursa con bacteremia y
En pacientes inmunodeprimidos, diabéticos o responde con lentitud al tratamiento anti-
ancianos suele tener un inicio insidioso, requi- biótico. Se detecta por ecografía y por TAC,
riendo la agudeza del clínico para sospechar que es la técnica de mayor sensibilidad en
su instauración. Las claves clínicas más rele- esta entidad.

1114
CAPÍTULO X: PIELONEFRITIS AGUDA

• Necrosis papilar. Puede cursar con hema- te cuando el cuadro clínico no es florido y se
turia, dolor lumbar, insuficiencia renal y/o intenta hacer diagnóstico diferencial con otras
shock séptico. Ocurre sobre todo en pa- condiciones, o cuando se desea establecer si
cientes con patología vascular. la flora implicada es Grampositiva, puesto que
en tal caso el tratamiento debe incluir un anti-
biótico activo frente a Enterococcus sp.
DIAGNÓSTICO
UROCULTIVO
UROANÁLISIS
Se realiza a partir de una muestra de orina de
Las siguientes son las características más
la primera hora de la mañana o, en su defecto,
relevantes en el examen de orina:
de una muestra de orina que haya permaneci-
do en la vejiga al menos por 4 horas. Debe
• Piuria. Se puede determinar mediante la
recogerse de la mitad de la micción, previo
prueba de la esterasa leucocitaria, la cual
lavado de los genitales. En las mujeres es es-
es equivalente a detectar 10 leucocitos/mL;
pecialmente importante dar instrucciones pre-
tiene una sensibilidad de 90% y especifici-
cisas sobre cómo tomar la muestra, separan-
dad superior a 95%. Se considera indicati-
do los labios vulvares para evitar contamina-
vo de piuria el hallazgo de más de 10 leuco-
ción externa. La muestra de orina tomada por
citos por mililitro de orina. En el examen
sonda debe limitarse al máximo. Es necesa-
del sedimento se considera indicativa de
rio prestar particular precaución en pacientes
piuria la presencia de más de 5 leucocitos
con sospecha de prostatitis, en cuyo caso se
por campo (x40). Se debe tener en cuenta
prefiere la punción suprapúbica.
que en algunos casos la ausencia de leuco-
citos en la orina no descarta un proceso
En la mayoría de los casos el urocultivo indica
infeccioso, principalmente en pacientes con
100.000 unidades formadoras de colonias por
uropatía obstructiva o neutropenia. Al con-
mililitro (105 UFC/mL) de un único patógeno,
trario, la leucocituria no es específica de
pero puede considerarse positivo un recuen-
infección, debido a que otras anomalías
to superior a 104 UFC/mL (sensibilidad de 90-
como litiasis ureteral, tuberculosis renal o
95%). El urocultivo puede ser negativo o te-
nefritis intersticial pueden cursar con leuco-
ner recuentos bajos cuando el paciente ha
cituria sin que el hallazgo implique inflama-
recibido antibióticos recientemente, presenta
ción secundaria a infección bacteriana.
obstrucción ureteral o la infección es causada
• Nitritos. Tiene una especificidad mayor de
por microorganismos de crecimiento lento.
90%, pero una sensibilidad de apenas 50%,
la cual puede ser aun inferior si la concen-
tración de microorganismos es menor de HEMOCULTIVOS
10/UFC/mL o el tiempo de permanencia de
la orina en la vejiga es inferior a 4 horas. Se deben tomar tres hemocultivos en los pa-
cientes con pielonefritis complicada que re-
TINCIÓN DE GRAM DE MUESTRA quieran hospitalización. Los hemocultivos son
DE ORINA SIN CENTRIFUGAR positivos en 20-30% de los pacientes con pie-
lonefritis, siendo más frecuentes en pacien-
Se considera indicada en situaciones espe- tes diabéticos, renales crónicos, ancianos o
ciales en los pacientes con IVU, principalmen- con procesos obstructivos del tracto urinario.

1115
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ESTUDIOS FUNCIONALES los casos que hayan cursado con litiasis,


Y MORFOLÓGICOS pionefrosis o abscesos.

Se deben practicar para evaluar factores


predisponentes o alteraciones de la vía urina- TRATAMIENTO
ria en los siguientes casos:
Antes de definir el esquema antibiótico se
• Pielonefritis en hombres de cualquier edad. debe establecer si el paciente requiere hospi-
• En mujeres con sospecha de patología talización y si la pielonefritis es complicada o
urológica. si tiene factores de riesgo para infección
• En mujeres con historia de infecciones uri- multiresistente.
narias recurrentes.
MANEJO DE PACIENTES QUE REQUIEREN
Los estudios disponibles son: HOSPITALIZACIÓN
• Ecografía o tomografía axial computado-
rizada (TAC). En el servicio de urgencias se determinará
- Se indica su realización desde el servi- hospitalización en los siguientes casos:
cio de urgencias en pacientes con sepsis
o shock séptico, falla renal aguda o ha- • Pacientes con signos de respuesta inflama-
llazgos en el examen físico que sugie- toria sistémica, sepsis severa o shock
ran masa renal. séptico.
- Se debe realizar en pacientes que no • Pacientes con vómito, deshidratación y sig-
mejoran luego de un curso de 72 horas nos de hipovolemia.
de antibióticos de amplio cubrimiento y • Pacientes con sospecha clínica de compli-
en dosis óptimas, en los cuales se debe cación local, a juzgar por los siguientes sín-
sospechar absceso renal, caso en el tomas y signos: dolor lumbar intenso, he-
cual la TAC con contraste es más sen- maturia franca, masa renal, insuficiencia
sible que la ecografía para identificar renal aguda.
abscesos de tamaño pequeño (<2 cm • Pacientes con condiciones especiales o
de diámetro) y áreas de nefritis focal enfermedades subyacentes, tales como
aguda. edad avanzada, diabetes, falla renal, cirro-
- Pacientes con sospecha de alteraciones sis, neoplasias, trasplante o antecedentes
urológicas o litiasis renal. de inmunosupresión.
• Radiografía simple de abdomen. • Pacientes que no se estabilizan luego de 6
Se recomienda en los casos de sospecha horas de manejo en el servicio de urgencias
clínica de urolitiasis o de pielonefritis gra- o tienen limitaciones para tolerar la vía oral.
ve para descartar la presencia de gas, ca-
racterística importante en la pielonefritis El tratamiento debe administrarse por vía pa-
enfisematosa. renteral siguiendo las recomendaciones de do-
• Urografía intravenosa. sificación previstas en la Tabla 1. El tratamien-
No se recomienda durante el episodio agu- to de elección se sustenta en los patrones de
do. Está indicada para el estudio posterior sensibildad local, teniendo en cuenta que exis-
en pacientes con sospecha de alteracio- ten instituciones con cepas de E. coli con tasas
nes urológicas, especialmente retención de resistencia mayor de 20% a quinolonas,
postmiccional o reflujo vesicoureteral y en donde se recomienda el uso en primera ins-

1116
CAPÍTULO X: PIELONEFRITIS AGUDA

tancia de cefalosporinas de espectro amplia- Los pacientes que ingresan con cuadro de
do asociadas o no a aminoglucósido. Si la re- sepsis severa o de shock séptico deben recibir
sistencia a quinolonas no es significativa, se manejo con cefepime, carbapenem (merope-
puede considerar el uso de: nem o imipenem), piperacilina-tazobatam,
asociados con amikacina (Tabla 1).
• Aminoglucósido asociado con ampicilina.
• Fluoroquinolona (ciprofloxacina, levofloxa- MANEJO DE PACIENTES CON RIESGO
cina, ofloxacina). DE INFECCIÓN POR MICROORGANISMOS
• Cefalosporina de amplio espectro (ceftria- RESISTENTES
xona, cefotaxima) con o sin aminoglucó-
sido. Se considera que el paciente tiene riesgo de
infección por microorganismos resistentes co-
Si se dispone de una tinción de Gram de la mo enterobacterias multirresistentes, P aeru-
orina que sugiera la existencia de cocos Gram ginosa, o Enterococcus spp en los siguientes
positivos puede emplearse ampicilina-sul- casos:
bactam o amoxicilina-ácido clavulánico con o
sin un aminoglucósido, con el fin de cubrir • Manejo reciente con antibióticos de amplio
Enterococcus spp. espectro o curso de antibióticos prolongado.
• Cirugía o manipulación urológica reciente
Una vez controlados los síntomas agudos, asociado a consumo de antibióticos de uso
principalmente la fiebre, y el paciente tolere prolongado o amplio espectro.
la vía oral, se puede pasar a terapia oral orien- • Sonda uretral permanente.
tada por el antibiograma (Tabla 2). • Patologías subyacentes como diabetes, fa-
lla renal aguda, cirrosis, neoplasias, inmu-
nosupresión, trasplante.

TABLA 1. MANEJO DE PIELONEFRITIS EN PACIENTES QUE REQUIEREN HOSPITALIZACIÓN.


ANTIBIÓTICOS DE USO INTRAVENOSO

ANTIBIÓTICO DOSIS
ampicilina 150-200 mg/kg cada 6 horas
ciprofloxacina 200-400 mg cada 12 horas
levofloxacina 250-500 mg día
ofloxacina 200 mg cada 12 horas
gentamicina 3-5mg/kg/día
amikacina 15 mg/kg/día
ampicilina-sulbactam 1,5-3 g cada 6 horas
ceftriaxona 1-2 g cada 24 horas
cefotaxima 1-2 g cada 8 horas
cefepime 1-2 g cada 12 horas
piperacilina tazobactam 3.375 g cada 6 horas o 13,5 g/24 horas
imipenem 500 mg cada 6horas
meropenem 500 mg-1g cada 8 horas

1117
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 2. ANTIBIÓTICOS ORALES PARA PIELONEFRITIS

ANTIBIÓTICO DOSIS
ciprofloxacina 500 mg cada 12 horas
levofloxacina 500 mg día
amoxacilina-acido clavulanico 500 mg/125 cada 8 horas
cefuroxima-axetil 500 mg cada 12 horas
ampicilina-sulbactam 375 mg cada 6 horas

Los pacientes con sospecha de infección por sulbactam) son eficaces, pero influyen nega-
microorganismos multiresistentes con una tivamente sobre la flora vaginal en tal forma
evolución clínica rápidamente progresiva o que las recurrencias son más frecuentes.
que cursen con sepsis severa o shock séptico
deben ser sometidos a estudios imagenoló- Con relación a la duración de la terapia, se
gicos con el fin de descartar abscesos, obs- deben tener en cuenta las siguientes consi-
trucción de la vía urinaria o colecciones, y en deraciones:
ellos se debe practicar drenaje percutáneo o
quirúrgico, según el caso. • La PA no complicada en mujeres requiere
14 días de tratamiento.
En tales circunstancias se puede utilizar mono- • Pacientes con pielonefritis complicada o
terapia con carbapenemes o piperacilina-tazo- con cuadro clínico inicial compatible con
bactam, teniendo en cuenta que el merope- sepsis severa o shock séptico deben com-
nem es menos activo frente a Enterococcus pletar tratamiento por 21 días.
faecalis que el imipenem. Como alternativa a • Es conveniente realizar un control con
la monoterapia puede emplearse ampicilina uroanálisis y urocultivo a las dos semanas
asociada con cefepime. de culminar el tratamiento

MANEJO DE PACIENTES CON


PIELONEFRITIS SIN FACTORES DE RIESGO PIELONEFRITIS Y EMBARAZO
Y SIN CRITERIOS DE HOSPITALIZACIÓN
La pielonefritis aguda es una infección fre-
En el servicio de urgencias se puede prescribir cuente durante el embarazo, pues ocurre en
una monodosis de cefalosporina de amplio es- 5% de las mujeres embarazadas y se consti-
pectro (ceftriazona o cefotaxime) o de amino- tuye en importante causa de morbilidad. En
glúcósido o fluoroquinolona (ciprofloxacina o razón de los cambios hormonales fisiológicos,
levofloxacina). Se requiere observación por 6 la incidencia de PA es mayor al final de segun-
horas, y si hay estabilidad clínica y tolerancia a do e inicio del tercer trimestre. La PA está rela-
la vía oral, se puede continuar con terapia oral cionada con mayor riesgo de parto prematuro
según las recomendaciones de la Tabla 2. y de recién nacidos con bajo peso; por lo tanto,
en toda mujer embarazada se debe prevenir
Hay que recordar que las asociaciones de pe- la PA mediante la monitorización estricta de
nicilinas con inhibidores de las beta-lactama- bacteriuria asintomática, haciendo urocultivos
sas (amoxicilina-ácido clavulánico, ampicilina- entre las semanas 14 y 16 de la gestación.

1118
CAPÍTULO X: PIELONEFRITIS AGUDA

El tratamiento empírico de la PA en mujeres 3. Hooton T. Practice guidelines for urinary tract


embarazadas incluye ampicilina-sulbactam, infection in the era of managed care. Int J Anti-
microb Agents 1999; 11:241-245.
ceftriaxona o aztreonam. Si no se logra una
4. Israel RS, Lowenstein SR, Marx JA, et al.
adecuada respuesta con los betalactámicos Management of acute pyelonephritis in an emer-
mencionados, se puede contemplar el uso de gency department observation unit. Ann Emerg
aminoglucósidos, teniendo en cuenta el poten- Med 1991; 20:253-257.
cial efecto de ototoxicidad para el feto. Las 5. Mensa J, Gatell JM, Jiménez de Anta MT, Prats
quinolonas no se recomiendan en el embarazo G. Guia de Terapéutica Antimicrobiana. Décima
edición. Editorial Masson. Barcelona, 2000.
por la potencial asociación con anomalías
6. Millar LK, Cox SM. Urinary tract infections compli-
óseas y articulares. Una vez controlados los cating pregnancy. Infect Dis Clin North Am 1997;
síntomas, se continúa manejo con cefalospo- 11:13-26.
rinas de segunda generación como cefuroxi- 7. Pinson AG, Philbrick JT, Lindbeck GH, et al. The
me-axetil. También puede usarse ampicilina- management of acute pyelonephritis in women: a
sulbactam. cohort study. Am J Emerg Med 1994; 12:271-278.
8. Safrin S, Siegel D, Black D. Pyelonephritis in adult
women: inpatient versus outpatient therapy Am J
Med 1988; 85:793-798.
LECTURAS RECOMENDADAS 9. Ward G, Jorden RC, Severance HW. Treatment
of pyelonephritis in an observation unit. Ann Emerg
1. Bergeron MG. Treatment of pyelonephritis in Med 1991; 20: 258-261.
adults. Med Clin North Am 1995; 79:619-649. 10. Warren JW, Abrutyn E, Hebel JR, et al. Guidelines
2. Delzell Jr JE, Lefevre ML. Urinary tract infections for antimicrobial treatment of uncomplicated acute
during pregnancy. Am Fam Physician 2000; bacterial cystitis and acute pyelonephritis in
61:713-721. women. Clin Infect Dis 1999; 29:745-758.

1119
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XI

Enfermedades de transmisión sexual


en urgencias
Juan Guillermo Chalela, MD
Jefe, de Sección de Dermatología
Fundación Santa Fe de Bogotá

A unque recientemente las enfermedades


de transmisión sexual (ETS) han aumen-
tado tanto en su prevalencia como en su inten-
44 años, lo que ha hecho pensar que para el
año 2005, la economía puede bajar en pro-
ducción en un 4% por culpa del SIDA.
sidad, la forma lenta de instauración, la esca-
sa sintomatología inicial y la lentitud en la apa-
rición de signos, hacen que las personas con- EXAMEN FÍSICO
sulten poco a los servicio de urgencias por
estas patologías. En general el interrogatorio no difiere del nor-
mal de cualquier historia clínica, pero los pa-
Enfermedades tales como las verrugas virales cientes, por razones culturales, se inhiben un
genitales o el virus papiloma y su presenta- poco más en cuanto a dar ciertos datos, a ve-
ción clínica genital y anal, las hacen de ma- ces muy relevantes en la historia clínica. La
yor importancia en este campo. La sífilis, la consulta externa es diferente de la situación
gonorrea, el chancro duro y el linfogranuloma en urgencias, porque casi siempre el paciente
venéreo se han considerado, lo mismo que llega remitido por otro colega que ha sospe-
sus complicaciones y su importancia seroló- chado una ETS. El interrogatorio debe hacerse
gica y de laboratorio, a pesar que durante un corto, con las preguntas estrictamente necesa-
tiempo y gracias al conocimiento de su tera- rias, sin estigmatizar al paciente, en la búsque-
péutica, descendieron en incidencia, de nuevo da epidemiológica de primera instancia; esta
y con el advenimiento del SIDA, han vuelto a parte se debe hacer cuando se haya estable-
incrementar su prevalencia y secuencia; a es- cido confianza con el paciente o cuando los
tas entidades se les deben sumar las úlceras exámenes sexológicos se hayan completado.
genitales, las uretritis, vaginitis, el síndrome
de dolor genital, el herpes genital, los condilo- El interrogatorio debe contener las siguientes
mas anales y genitales, además de las mani- preguntas básicas: antecedentes personales,
festaciones cutáneas y sistémicas del SIDA. hábitos sexuales, prácticas sexuales, número
y tipo de contactos sexuales anteriores, aler-
Las ETS constituyen un problema de salud gias a fármacos, hábitos tóxicos (alcohol,
pública. La OMS estimó que en 1995 había cigarrillo, alucinógenos). Es importante esta-
más de 333 millones de personas afectadas blecer el tiempo de iniciación de la enferme-
con ETS en el mundo. Las edades mas co- dad actual y en el examen físico identificar no
rrientes de aparición están entre los 15 y los sólo la lesión motivo de la consulta, sino la

1120
CAPÍTULO XI: ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL EN URGENCIAS

búsqueda de lesiones cutáneas, genitales LESIONES ESPECIFÍCAS


ginecológicas y anales.
ÚLCERAS GENITALES
Una vez hecho un buen examen físico que
incluye boca, piel cabelluda y organomegalias Constituyen la causa más común de consulta
(adenopatías, hepatomegalia y esplenomega- a urgencias. Numerosas enfermedades se ca-
lia), se debe proceder con los exámenes bac- racterizan por la aparición de úlceras geni-
teriológicos que en urgencias no pasarán de tales:
una citología, frotis de flujos o secreciones y
examen por campo oscuro. Herpes Genital: úlcera de corta duración,
recurrente, dolorosa, a veces pruriginosa, pe-
En condiciones muy específicas se deben or- queña, poco indurada y muchas veces acom-
denar radiografías de tórax o de huesos. En pañada de adenopatías regionales. El herpes,
ciertos casos es muy importante informar a en la mayoría de los casos, se caracteriza por
los (las) compañeros (as) sexuales sobre los tener pródromos.
signos y síntomas del paciente, guardando las
debidas precauciones sobre su intimidad. Sífilis: las úlceras de la sífilis pueden ser de
corta duración, hasta 90 días, no recurren, son
fundamentalmente asintomáticas, aunque
PRUEBAS DE LABORATORIO duelen ligeramente al tacto, casi siempre úni-
cas, no pruriginosas, induradas, pequeñas y
Los exámenes de laboratorio que se solicitan producen adenopatías regionales.
en urgencias dependen estrictamente del tipo
de consulta, de los riesgos que tenga el pa- Chancroide: lesiones de corta duración, no
ciente, de los aspectos demográficos, del tipo hacen recurrencia, son muy dolorosas, secre-
de prácticas del paciente y, obviamente, de tantes, con eritema a su alrededor y se acom-
las lesiones que presente en el momento de pañan de adenopatías satélites, las cuales tie-
la consulta. nen tendencia a ulcerarse y a simular la úlcera
genital.
Las pruebas más importantes, en términos
generales, son: Granuloma inguinal: son lesiones de muy lar-
ga duración, asintomáticas pero con tenden-
Coloración de Gram: para secreciones ure- cia a destruir la zona, de borde infiltrado y sin
trales, vaginales, de endocérvix y de recto. adenopatías regionales.

Citología: para secreciones vaginales, lesio- Linfogranuloma venéreo: produce lesiones


nes vesiculosas o ampollosas en el herpes y dolorosas, de corta evolución, pequeñas,
para condilomas. acompañadas de adenopatías satélites muy
grandes que confluyen hasta formar verdade-
Pruebas para clamidia, hepatitis C y B y ros bubones que son eritematosos y se ulce-
prueba VIH, cuando sea posible realizarla. Ya ran o destruyen en forma generalizada.
en la consulta externa se deben recordar las
pruebas para hepatitis, serología para sífilis, Leishmaniasis: sus lesiones son de larga du-
clamidia y VIH. ración, ligeramente pruriginosas, de borde
bien definido, superficie limpia, de tamaño

1121
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

pequeño, con ocasionales adenopatías y sin • ceftriaxona 125 mg IM + azitromicina o


historia de ETS. doxiclina en las mismas dosis, por 7 días;
• ciprofloxacina 500 mg por vía oral + azitro-
Amebiasis cutánea: las lesiones son de larga micina o doxiciclina;
duración, aparecen sucias, dolorosas, indu- • ofloxacina 400 mg por vía oral + azitromi-
radas o infiltradas, de tamaño variable y con cina o doxiciclina.
adenopatías regionales.
En casos de alergias, espectinomicina 2 g IM.
Enfermedad de Behçet: las lesiones son re-
currentes, de tamaño variable, dolorosas, de Durante el embarazo, cefixime 400 mg por vía
aspecto aftoide y sin adenopatías regionales. oral o ceftriaxona 125 mg por vía IM o
spectinomicina 2 g IM.
Enfermedad de Crohn: produce lesiones de
tamaño variable, recurrentes, dolorosas y no URETRITIS NO GONOCÓCICA
se acompañan de adenopatías.
Es una de las más comunes ETS en el hom-
Facticia (autoinfringida): se presentan como bre, y se acompaña de numerosas complica-
lesiones dolorosas, pruriginosas, infectadas, ciones, como las epididimitis, y en las muje-
variable en su tamaño y con adenopatías re- res de dolor pélvico, infertilidad y embarazo
gionales si hay infección. ectópico. La evaluación clínica de esta afec-
ción se debe hacer con base en una historia y
GONORREA (BLENORRAGIA) un examen físico muy completos, revisando
descargas uretrales, disuria y síntomas con-
Se caracteriza por la presencia de una des- comitantes; se deben practicar frotis y cultivo
carga uretral dolorosa, de color verdoso o de la secreción uretral, en búsqueda de diplo-
blanco, que puede presentarse en forma per- cocos intracelulares, gérmenes Gram positi-
manente hasta por una o dos horas, en el hom- vos o negativos, células inflamatorias y sedi-
bre. En la mujer la uretra y el cervix, pero no mento urinario anormal.
la vagina, pueden exhibir la misma secreción
que a veces se observa en la zona anal. Los gérmenes más comúnmente asociados
con esta enfermedad son: Ureaplasma urealiti-
En los homosexuales la descarga es anal,
cum, Micoplasma genitalium, Trichomona
cuya mucosa aparece eritematosa, friable,
vaginalis, Staphylococcus saprofiticus,
dolorosa y se asocia con ligeras adenopatías.
Hemofilus spp, Bacteroides ureoliticus.
La faringe puede ser hiperémica o mostrar
aumento del tamaño de las amigdalas. El exa-
Hay varias formas de uretritis en las cuales
men directo de la secreción y el cultivo cons-
no se observan gérmenes, como en el caso
tituyen las pruebas diagnósticas.
de la enfermedad de Reiter.
El tratamiento depende de la susceptibilidad
a los antibióticos, pero en términos generales ENFERMEDAD PÉLVICA INFLAMATORIA
los protocolos de terapia son:
La enfermedad pélvica inflamatoria (EPI) se
• cefixime 400mg por vía oral + azitromicina refiere a la infección del útero, las trompas de
1 g por vía oral o doxiciclina 100 mg, 2 ve- Falopio y las estructuras pélvicas adyacentes,
ces al día por 7 días; no asociada con cirugía o embarazo, e incluye:

1122
CAPÍTULO XI: ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL EN URGENCIAS

endometritis, salpingitis, salpingo-ooforitis, excesiva higiene y el tener varios (as) com-


anexitis, parametritis, piosalpinx, abscesos pañeros (as) sexuales. Las balanitis son pro-
tubo-ováricos, peritonitis pélvica, peri-hepati- ducidas por Candida, Estreptococo, Gardne-
tis y periapendicitis. Suele presentarse en mu- rella, Bacteroides, Tricomonas, sífilis, TBC,
jeres jóvenes con varios compañeros sexua- amebiasis, herpes genital, papiloma virus.
les o con DIU mal colocado, fumadoras, que Otras causas son el liquen escleroso y atrófico,
usan duchas vaginales frecuentemente o que la balanitis xerótica obliterans, la balanitis
tienen infecciones gonocócicas o vaginitis circinada de Reiter, lesiones premalignas, pén-
bacteriana. figo, erupción fija por drogas, dermatitis de
contacto alérgico, psoriasis, trauma.
Hay un rango grande de manifestaciones clí-
nicas que se caracterizan por dolor abdominal Clínicamente se manifiesta como eritema bri-
bajo, descargas vaginales anormales, metro- llante, mucosa friable que sangra fácilmente,
rragia, sangrado poscoital, sangrado uterino dolor, secreción blanquecina y maceración hú-
anormal, disuria, fiebre, náusea o vómito. El meda de la zona. El diagnóstico es muy difícil
diagnóstico se hace por la clínica y se conso- desde el punto de vista clínico, por lo cual se
lida con la serología, VSG elevada, leuco- deben hacer exámenes, cultivos y biopsia; el
citosis o PCR positiva. Ocasionalmente el dermatólogo debe estar presente en el ma-
diagnóstico se hace por laparoscopia. nejo de esta patología.

El tratamiento de la EPI se efectúa según la CONDILOMAS GENITALES Y ANALES


causa, pero generalmente se fundamenta en
regímenes antimicrobianos. Si la paciente está Tal vez una de las más frecuentes lesiones
hospitalizada se suele prescribir cefoxitin 2 g de ETS en el momento. Son producidas por
por vía IV cada 6 horas + doxiciclina 100 mg papiloma virus humano, siendo los HPV 6 y
por vía oral cada 12 horas, régimen que se 11 los más comunes; los HPV 16 y 18 están
mantiene por 48 horas, para luego continuar ligados a la posibilidad de cáncer de cuello
la doxiciclina cada 12 horas por 14 días. uterino o de glande y prepucio. Se caracteri-
za por la aparición de verrugas genitales, acu-
Otro protocolo es con clindamicina 900 mg IV minadas o papulosas, hiperqueratósicas, que
cada 8 horas + gentamicina 2 mg/kg IV o IM a veces son difíciles de tratar. Se puede aplicar
inicialmente, y luego 1,5 mg/kg cada 8 horas. ácido acético al 3% o al 5%, que hace más
A este régimen se le puede adicionar metro- evidente la lesión. Las lesiones son únicas o
nidazol. múltiples, a veces pigmentadas, y hay formas
muy tumorales que semejan una coliflor de
Si la paciente es ambulatoria, ofloxacina 400 gran tamaño. En la mujer la lesión puede ser
mg VO 2 veces al día por 14 días, luego clinda- vulvar, anal o la llamada papilomatosis
micina 450 mg VO 4 veces al día o etronidazol vestibular.
500 mg VO 2 veces al día por 14 días.
En urgencias no se realizan exámenes de la-
BALANITIS boratorio, pero la clínica en general debe ha-
cer sospechar la enfermedad. El tratamiento
La balanitis es la inflamación del glande. Tie- se hace en la consulta externa e incluye va-
ne ciertas condiciones predisponentes tales rias modalidades tales como podofilina, podo-
como la falta de circuncisión, la pobre o la filotoxina, ácido tricloroacético, 5 fluoracilo,

1123
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

crioterapia, imiquimod, cidofovir, escisión qui- Las lesiones se inician con sensación de ar-
rúrgica, electrocirugía, láser e interferón. Du- dor y dolor en la zona, ligero malestar general,
rante el embarazo todos estos medicamen- rara vez febrícula y dolores óseos; luego hay
tos están contraindicados (a excepción de crio- eritema cutáneo y posteriormente la aparición
terapia), por lo que se debe hacer cesárea y de pequeñas vesículas uniloculares, brillan-
evitar la posibilidad de papilomatosis laríngea tes, que se van uniendo hasta formar zonas
en el recién nacido. de vesículas confluentes, sobre área eritema-
tosa y con frecuencia acompañadas de adeno-
MOLUSCO CONTAGIOSO patías regionales. A veces las lesiones se ex-
tienden al área perianal, escroto, vulva, muco-
Producido por el Poxvirus es un cuadro muy sa vaginal y cuello uterino. El diagnóstico es
frecuente en pacientes con algún grado de esencialmente clínico, pero se pueden obser-
inmunosupresión, hasta el punto de que hoy var las inclusiones virales. El tratamiento se
en día se piensa que cualquier paciente adul- hace por consulta externa con antivirales es-
to con molusco contagioso debe ser estudia- pecíficos como el aciclovir y el alaciclovir.
do a fondo. Se caracteriza por micropápulas
brillantes, de color piel, con umbilicación cen- SÍFILIS
tral, las cuales al “exprimirlas” dejan ver una
secreción blanquecina saliendo por el centro. Aunque su frecuencia y prevalencia descen-
dieron con el advenimiento de la penicilina, des-
La incubación dura entre 14 y 50 días luego de la aparición del SIDA la enfermedad ahora
de una relación infectiva y se localiza en pene, reaparece. Producida por el Treponema palli-
escroto y área púbica en el hombre y en vul- dum, se divide en sífilis reciente, temprana, in-
va, zona anal, perianal y pubis en la mujer. fecciosa o precoz y sífilis tardía no infecciosa.
Son asintomáticas, pero tienden a autoconta-
giarse lo que lleva al paciente a consultar. El La forma primaria se caracteriza por la apari-
tratamiento es la destrucción de la lesión con ción del chancro de Hunter, un chancro general-
crioterapia, curetaje o antralina. mente único, asintomático pero doloroso a la
presión con las manos, acompañado de ade-
HERPES GENITAL nopatías regionales; la localización normal es
genital pero a veces se ve una localización
Es una entidad cada vez más frecuente y más extragenital, como serían la boca, ano o dedos
difícil de manejar. Requiere descartar nume- de las manos.
rosos diagnósticos diferenciales. Es produci-
da por el herpes simple 2 (HSV-2), tiene una La forma secundaria se caracteriza por lesio-
prevalencia de 30% de todas las ETS, tenien- nes cutáneas maculares (roseola), papulares
do en cuenta que hasta el 55% de los indivi- (condiloma plano, rupias, sifílides nigracan-
duos sanos pueden tener serología positiva tes), nódulos y lesiones papulo-ulcerosas o
para HSV-2. Clínicamente se caracteriza por gomas sifilíticos.
ser recidivante, siendo la primera presenta-
ción la forma más sintomática y difícil de tra- En la fase terciaria de la sífilis aparecen las
tar, mientras que las formas recidivantes sue- formas gomosas en la piel, tubérculos y las
len ser menos sintomáticas y se acompañan formas neurológicas. Tanto el estudio seroló-
de prodromos verdaderos. gico como el tratamiento se hacen en la con-
sulta externa y no son de manejo en urgencias.

1124
CAPÍTULO XI: ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL EN URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Acosta J, Prieto F, Rodríguez D, et al. Situación 9. Hittleman J, Llorente A, Matzen E. High rates of
actual de las enfermedades de transmisión sexual behavioral problems in perinatally HIV-infected
en Colombia 1976-2000. Biomédica 2000; 22: 77- children are not linked to HIV disease. Pediatrics.
89. 2003; 111:384-393.
2. Bessinger GT, Conologue TD, Krivda SJ, Turiansky 10. Manhart LE, Critchlow CW, Holmes KK, et al.
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immunodeficiency syndrome. Arch Arch Dermatol lium. J Infect Dis 2003; 187:650-657.
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3. Centers for Disease Control and Prevention. HIV/ misión sexual en los tiempos del SIDA. Editorial
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12. Pourbohloul B, Brunham RC. Targeted mass
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13. Vera L, López N, Orozco L, et al. Conocimientos,
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behavioral intervention to reduce sexually trans- tion. Clin Infect Dis 2003; 36:663-668.
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transmitted infections. BMJ 2001; 322:1160-1164. 2002; 137:255-262.

1125
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XII

Infección por herpes simple

Lucas Andrés Salas, MD


Hospital Centro Oriente II Nivel
Secretaría Distrital de Salud
Bogotá

Juan Manuel Gómez


Sección de Infectologia
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a infección por virus de la familia


Herpesviridae es una de las enfermeda-
des más comunes en el ser humano, y la in-
versión. El riesgo de seroconvertir en adultos
es de 1,6:100 cada año para VHS-1 y de
5,1:100 cada año para VHS-2, con diferen-
fección por el herpes simple es la más preva- cias según la distribución local de los casos
lente en la población general. seroprevalentes.

El virus herpes simple corresponde al subgru-


po de alfaherpesvirus, cuyo tropismo es hacia HISTORIA NATURAL
células epiteliales de piel, mucosas y neuro-
nas. Dentro de este grupo se incluyen las dos La transmisión del patógeno se realiza por
variantes de herpes simple, VHS-1 y VHS-2, contacto estrecho entre mucosas, inoculación
y el virus varicela zóster. La infección por her- del patógeno directamente en la piel o por
pes simple en cualquiera de sus dos variantes aerosoles. La transmisión por fómites requiere
se caracteriza por múltiples recurrencias de la un inoculo fresco debido a que el virus es lábil
enfermedad a lo largo de la vida del individuo. en el medio ambiente. Una vez inoculado, el
virus comienza a replicarse localmente y se
transporta por flujo axoplásmico retrógrado a
EPIDEMIOLOGÍA ganglios neuronales regionales, generalmen-
te sacros y trigeminales.
En los Estados Unidos se estima que 90% de
los adultos en la quinta década de su vida pre- La respuesta inmunitaria depende de linfocitos
sentarán anticuerpos contra alguno de los dos T, natural killers y macrófagos, que son los
tipos de herpes simple. En condiciones de ha- encargados de controlar la replicación del vi-
cinamiento se considera que de 80-100% de rus en piel y mucosas, aunque las copias ge-
la población presentarán anticuerpos antes de néticas de ADN extracromosomal implantadas
concluir la tercera década de la vida, mien- a nivel ganglionar provocan infecciones recu-
tras que en condiciones higiénicas óptimas rrentes en el curso de la vida. Las secuencias
sólo de 30-50% de los individuos compara- de latencia del virus ya han sido identificadas
bles de la misma edad presentarán serocon- y se expresan de manera preferencial en

1126
CAPÍTULO XII: INFECCIÓN POR HERPES SIMPLE

algunos momentos de estrés fisiológico, como • Infecciones oculares: la manifestación ini-


fiebre o infecciones respiratorias altas. La cial es similar a la de una conjuntivitis, con
reactivación en individuos inmunocomprome- ardor, quemosis y fotofobia; posteriormente
tidos genera lesiones persistentes genitales y aparecen las lesiones características de
extragenitales y, en algunos casos, puede lle- queratitis dendrítica con disminución de la
gar a comprometer vísceras. agudeza visual. La enfermedad se autoli-
mita en dos a tres semanas sin dejar cica-
Los dos tipos de virus tienen preferencia por trices corneales. En infecciones recurrentes
áreas genitales o extragenitales (VHS- 1 o 2); la córnea tiende a neovascularizarse con
sin embargo, cualquiera de los tipos de virus pérdida progresiva de la agudeza visual.
puede producir lesiones en una u otra área o Al igual que con la varicela zóster, se pue-
ser transportados de una área a otra (contac- de presentar un cuadro de retinitis necroti-
to orogenital). Para más información sobre zante semanas después de terminar el cua-
herpes genital debe consultarse la guía co- dro agudo, con punteados en el fondo de
rrespondiente en esta misma serie. ojo, que en pacientes inmunocomprome-
tidos tienden a coalescer y resultan en
amaurosis completa.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS • Eczema herpeticum: pacientes que hayan
tenido una infección primaria por herpes
• Infecciones orofaciales: El cuadro inclu- simple y que presenten lesiones eczemato-
ye manifestaciones prodrómicas con ma- sas o quemaduras pueden desarrollar reac-
lestar general, mialgias, hiporexia, irritabi- tivación de la enfermedad en el área cruen-
lidad, adenopatías cervicales, que puede ta con la posibilidad de sobreinfección o
durar de 3 a 14 días. Las ulceraciones ca- como manifestación de una infección her-
racterísticas de la enfermedad aparecen pética diseminada.
después de este lapso, en el paladar duro • Parálisis de Bell: se han recuperado se-
y blando, encías, lengua, labios y piel de la cuencias de ADN de alfaherpesvirus de
cara. Aparecen pequeñas vesículas que ganglios trigeminales de pacientes con pa-
coalescen para formar úlceras blanqueci- rálisis de Bell, lo cual demuestra una cau-
nas en las mucosas o pústulas en la piel; sa infecciosa de la enfermedad. Se han
posteriormente se forma una costra en las intentado diversos manejos antivirales, con
lesiones dérmicas que cubre el área cruen- corticoesteroides y tratamientos combina-
ta y que desaparece espontáneamente en dos a fin de disminuir la morbilidad causa-
cinco a catorce días sin dejar cicatriz visi- da por la enfermedad.
ble. En los niños el dolor puede limitar se- • Encefalitis herpética: el virus puede gene-
riamente la ingesta alimentaria, comprome- rar áreas hemorrágicas lobulares o ganglio-
tiendo su estado general por deshidrata- basales; el compromiso focal se puede de-
ción. En los adolescentes y adultos cursa terminar por cambios imagenológicos, pero
como una faringomigdalitis inespecífica. la determinación del agente debe realizar-
El cuadro recurrente se puede manifestar se por técnicas de PCR (reacción en ca-
en cualquier momento de la vida, con reac- dena de la polimerasa) o biopsias del área
tivaciones limitadas similares al cuadro pri- comprometida en que se aísle el VHS-1.
mario, pero con una fase prodrómica ace- • Meningitis aséptica: cursa como un cua-
lerada (24-48 horas) y lesiones limitadas a dro de virosis respiratoria, para luego pre-
una décima parte del compromiso inicial. sentar signos meníngeos y cambios en el

1127
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

estado de conciencia. Pueden darse des- manera menos frecuente se puede gene-
cargas epileptiformes sin que sea posible rar una hepatitis viral, y hay que descartar
demostrar un compromiso focal del parén- primero otros herpesvirus con tropismo
quima cerebral. El líquido cefalorraquídeo menos específico, como citomegalovirus.
es claro, con aumento de células mononu- • Panadizo herpético: la infección ocupacio-
cleares, glucorraquia normal y aumento nal en odontólogos y personal paramédico
leve de proteínas. Para prescribir un trata- que no usaba las precauciones universales
miento preciso debe identificarse ADN viral fue muy frecuente en el siglo pasado; ahora
por PCR u otra técnica inmunológica equi- sólo hay reportes ocasionales de infeccio-
valente para diferenciarla de otras menin- nes en los dedos por manipulación im-
gitis virales por enterovirus, tuberculosis y prudente de pacientes con lesiones activas.
micosis. La enfermedad se inicia con edema y erite-
• Enfermedad visceral: pacientes con neo- ma del dedo, y luego aparecen pústulas que
plasias hematológicas, trasplantados o pa- fistulizan a la superficie cutánea. Hay
cientes VIH positivos pueden tener disemi- linfadenitis epitroclear o axilar asociada.
nación de la enfermedad a órganos sólidos.
El tracto gastrointestinal es el principal afec- En la tabla siguiente se resume el tratamiento
tado y puede presentar lesiones en cual- de la enfermedad en sus diversas manifesta-
quier porción, desde la boca al ano. De ciones.

TRATAMIENTO

Enfermedad Antiviral Dosis Tiempo de tratamiento


Infección orofacial Aciclovir 200 mg PO cinco veces 10-14 días y extender 7
primer episodio por día días si continúan síntomas
Aciclovir 400 mg PO tid 10-14 días
Valaciclovir 500-1000 mg PO tid 7 días
Famciclovir 250 mg PO tid 7 días
Infección orofacial Penciclovir Crema 1% aplicar tópico 4 días
recurrencia cada 2 h
Aciclovir Crema aplicar tópico cada 2 h 4 días
Aciclovir 400 mg PO tid Desde prodromos 5 días.
Parálisis de Bell Aciclovir 400 mg PO cinco veces al día 10 días. Más prednisona 30
mg PO bid disminuir gra-
dualmente desde el 5° día.
Encefalitis Aciclovir 10 mg/kg IV tid 14-21 días
Esofagitis Aciclovir 5 mg/kg IV tid 7 días
Valaciclovir 1 gr PO tid 10-14 días
Panadizo herpético Aciclovir 400 mg PO tid 7 días
Herpes diseminado Aciclovir 10 mg/kg tid 7-14 días
Herpes resistente Foscarnet 40 mg/kg tid 7-21 días
Herpes ocular* Trifluridina, idoxuridina, 1 gota c/2h
aciclovir colirio 21 días
* Consulte con un oftalmólogo antes de iniciar tratamiento y para continuar tratamiento supresivo a largo plazo.

1128
CAPÍTULO XII: INFECCIÓN POR HERPES SIMPLE

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Balfour H. Antiviral drugs. N Engl J Med 1999; simplex virus Type 1 and Type 2. N Engl J Med
340:1255-1268. 1999; 341:1432-1438.
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Practice of Infectious Diseases. G Mandell. ses of orofacial soreness and pain. BMJ 2000;
Churchill Livingstone. New York, 2000. 321:162-165.
3. Kimberlin D, Whitley R. Herpes simplex En: 7. Watemberg N, Morton LD. Periodic lateralized
Current Therapy of Infectious Disease. F epileptiform discharges. N Engl J Med 1996;
Schlossberg. Second edition. Mosby. St Louis, 334:634-634.
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4. Koelle, DM, Corey L. Recent progress in herpes versus acyclovir therapy in herpes simplex
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prospective study of new infections with herpes rus eye disease. N Engl J Med 1998; 339:300-306.

1129
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XIII

Infecciones por herpes zóster

Lucas Andrés Salas, MD


Hospital Centro Oriente, II Nivel
Secretaría Distrital de Salud
Bogotá

Juan Manuel Gómez


Sección de Infectologia
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l virus varicela zóster es un herpesvirus


con tropismo por neuronas, epitelio y
mucosas que puede generar dos tipos de ma-
sensitivos de la raíz dorsal y en las células
satélites de los ganglios. Dentro de su maqui-
naria replicativa posee la enzima timidina
nifestaciones patológicas: cinasa, la cual es el blanco de los antivirales
usados para su manejo.
1. Infección primaria con un exantema vesi-
cular diseminado (varicela) que se presen-
ta generalmente en la infancia como un EPIDEMIOLOGÍA
cuadro benigno autolimitado.
2. Reactivación secundaria siguiendo el tra- En los Estados Unidos se considera que 90%
yecto de un dermatoma con una erupción de la población adulta ha estado expuesta al
vesicular localizada y un área dolorosa virus en algún momento de su vida. La inmu-
(herpes zóster). nidad para los herpesvirus se genera por res-
puesta celular de linfocitos T, la cual puede
desaparecer con el paso del tiempo. El virus
ETIOLOGÍA latente puede reactivarse por mecanismos no
del todo dilucidados, frente a agresiones am-
El virus varicela zóster es un alfaherpesvirus bientales o a cambios en el estado de inmuni-
(virus ADN) de ciclo reproductivo corto y lítico dad del individuo (pérdida de la homeostasis
(destruye la célula huésped al reproducirse) entre el virus latente y la célula donde se en-
que genera infección latente en los ganglios cuentra).

Probabilidad de herpes zóster por grupos de edad


<20 años 0,4-1,6:1000
20-75 años 1,5-3,0:1000
>75 años 4,5-11:1000
VIH(+) 29,4:1000
*Se multiplica el riesgo por 50 a 100 en leucemias y linfomas.

1130
CAPÍTULO XIII: INFECCIONES POR HERPES ZOSTER

Todo paciente menor de 50 años con herpes DIAGNÓSTICO


zóster y sin otra enfermedad de base, debe
recibir consejería para descartar infección por El diagnóstico del herpes zóster es clínico; en
VIH. caso de dudas o presentaciones atípicas con
compromiso de varios dermatomas, se pue-
den realizar pruebas especiales. La primera
EVOLUCIÓN CLÍNICA es la de Tzanck, un extendido de células de
la base de las lesiones vesiculares, en el cual
Las primeras manifestaciones del herpes zós- la demostración de células multinucleares es
ter son totalmente inespecíficas. Se presenta sugestiva de infección por herpesvirus (sen-
un pródromo ‘viral’ con malestar general, as- sibilidad no mayor que 60%). En caso de duda
tenia, adinamia, cefalea global, fotofobia, pero o frente a casos especiales, se pueden usar
rara vez hay fiebre. La enfermedad progresa pruebas de inmunofluorescencia o ELISA para
con la aparición de un área localizada de di- varicela zóster. El diagnóstico definitivo se
sestesia, y luego aparecen lesiones maculopa- hace solo mediante el aislamiento del virus
pulares que se tornan en vesículas agrupa- en cultivo de tejido.
das en racimos que siguen el trayecto de un
dermatoma y no cruzan la línea media. Las
lesiones cutáneas evolucionan como las de DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
una varicela (15-20 días) y generalmente de-
jan una cicatriz hiperpigmentada al sanar. En ausencia de manifestaciones cutáneas se
deben descartar otras causas de dolor de
La complicación más temida en el zóster no acuerdo con el segmento comprometido (ver
complicado es la neuralgia postherpética, la guías de Dolor torácico, Cefalea y Dolor
cual se caracteriza por una zona de alodinia abdominal en esta misma serie).
(sensación anormal de dolor ante cualquier
estímulo) que persiste por más de un mes des- En presencia de manifestaciones cutáneas se
pués de desaparecer los síntomas primarios deben descartar otras enfermedades exante-
de la enfermedad. Según diversos reportes, máticas (virales, autoinmunes, reacciones me-
se presenta en 8% a 70% de los casos, pero dicamentosas) que pueden tener complicacio-
puede limitarse en el tiempo; a mayor edad nes más serias que el zóster. Si la manifesta-
existe un mayor riesgo de neuralgia posther- ción cutánea es la de un herpes zóster dise-
pética: en los individuos de más 50 años por minado, se debe diferenciar de la varicela no
cada año de edad aumenta el riesgo casi en complicada y complicada y de algunos tipos
9%. de pénfigo cutáneo. Tanto el virus del herpes
simplex como coxsackie pueden producir le-
El compromiso de la primera rama del trigé- siones vesiculares con un patrón dermatomal.
mino, la oftálmica, obliga a evaluación inme-
diata por parte del oftalmólogo por el alto ries- La primoinfección por varicela en adultos pue-
go de complicaciones a largo plazo, que in- de complicarse con neumonitis, encefalitis,
cluyen ceguera. Si es posible, se debe contac- hepatitis y viremia entre otras, y puede repre-
tar un oftalmólogo experto en córnea. sentar la primera manifestación de una neo-
plasia maligna, un proceso autoinmune o una
infección por VIH.

1131
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COMPLICACIONES res son útiles en la neuritis herpética (fase


aguda).
El zóster diseminado puede ser fatal en 5-15%
de los casos, aun con tratamiento antiviral ade- Se requiere un manejo agresivo de la neural-
cuado, o puede generar graves secuelas neu- gia postherpética por las serias limitaciones
rológicas como parálisis o hemiparesía contra- que ésta implica para el paciente; el uso de
lateral tardía. anestésicos locales, capsaicina en crema o
bloqueos simpáticos son las primeras aproxi-
La necrosis retiniana progresiva puede mani- maciones para el manejo del dolor. El trata-
festarse meses después de haber mejorado miento definitivo debe instaurarse con un es-
el cuadro agudo. Puede llevar a amaurosis. pecialista según el tipo de dolor (lancinante,
urente) y la respuesta a las diferentes tera-
pias en consulta externa. El dolor nunca debe
TRATAMIENTO subestimarse por su cronicidad y puede ser
un motivo de consulta de urgencia.
El manejo farmacológico debe individualizarse
según la sintomatología y la edad del paciente:

1. Pacientes menores de 50 años con sínto- LECTURAS RECOMENDADAS


mas leves: analgésicos y recomendaciones
1. Helgason S, Petursson G, Gudmundsson S,
de control, incluyendo asesoría para des-
Sigurdsson J. Prevalence of postherpetic neural-
cartar infección por VIH, cuando sea perti- gia after a first episode of herpes zoster:
nente. prospective study with long term follow up. BMJ
2. Pacientes mayores de 50 años o de me- 2000; 321:794-797.
nor edad pero con síntomas moderados a 2. Kost R, Straus S. Postherpetic neuralgia:
severos: antivirales (aciclovir 800 mg PO pathogenesis, treatment, and prevention. N Engl
cinco veces al día por 7-10 días, o valaci- J Med 1996; 335:32-42.
clovir 1g PO tid por siete días, o famciclovir 3. Gnann JW, Whitley RJ. Herpes zoster. N Engl J
Med 2002; 347:340-6.
500 mg PO tid por siete días).
4. Balfour H. Antiviral drugs. N Engl J Med 1999;
3. Paciente con herpes zóster oftálmico: tra- 340:1255-1268.
tamiento sistémico. Cuando se presenten 5. Gilden D, Kleinschmidt-DeMasters BK, LaGuardia
síntomas oculares requiere valoración JJ, et al. Neurologic complications of the
oftalmológica. reactivation of varicella–zoster virus. N Engl J Med.
4. La adición de prednisona mejora la calidad 2000; 342:14, 635-645.
de vida (disminución del dolor, mejoría del 6. Kennedy PG, Grinfeld E, Bell J. Varicella-zoster
sueño y retorno a la actividad normal). virus gene expression in latently infected and
explanted human ganglia. J Virol 2000; 74:11893-
11898.
La higiene local, la prevención de sobreinfec- 7. Cohrs RJ, Randall J, Smith J, et al. Analysis of
ciones bacterianas y la analgesia deben ha- individual human trigeminal ganglia for latent her-
cer parte del manejo integral del paciente. El pes simplex Virus Type 1 and varicella-Zoster vi-
uso de acetaminofén, antiinflamatorios no rus nucleic acids using real-time PCR. J Virol 2000;
esteroideos y acetaminofén/codeína o simila- 74:1464-1471.

1132
CAPÍTULO XIV: INFLUENZA

CAPÍTULO XIV

Influenza

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina FEPAFEM
Bogotá

INTRODUCCIÓN

I nfluenza es una infección respiratoria agu-


da causada por el virus de la influenza tipo
A o B. Con base en criterios clínicos no es
nes. En la actualidad están en circulación dos
subtipos antigénicos de virus influenza tipo A,
H1N1 y H3N2.
fácil diferenciar la influenza de otras causas
de infección respiratoria aguda. La prevalencia de la infección es más alta en
niños de edad escolar. Las personas con alto
En la mayoría de los casos es una enferme- riesgo de padecer enfermedad grave y com-
dad de moderada gravedad que se transmite plicaciones son los individuos mayores de 65
de persona a persona por secreciones nasales años, aquellos con EPOC, insuficiencia cardia-
o por la tos. ca congestiva y falla renal.

La influenza es una causa muy frecuente de


consulta a los servicios de urgencia. FISIOPATOLOGÍA
El agente etiológico de la influenza es un vi-
EPIDEMIOLOGÍA rus ARN que hace parte de la familia Orthomy-
xoviridae. Estos virus se clasifican de acuer-
La influenza aparece en brotes epidémicos do a dos proteínas de superficie, la hemaglu-
relacionados con las estaciones o con los cam- tinina y la neuraminadasa.
bios en el clima. En Colombia aparece rela-
cionada con la época de lluvia. La hemaglutinina se une a los lípidos y pro-
teínas que contienen ácido en las células del
La epidemia ocurre por cambios antigénicos receptor, lo que facilita la entrada del virus al
menores de las proteínas del virus, principal- endosoma. Cuando el endosoma se une al
mente del tipo A, pero también puede originar lisosoma, la hemaglutinina sufre una serie de
pandemias ocasionadas por cambios antigé- cambios conformacionales de acuerdo al pH.
nicos mayores que no tienen relación con las Actúa como mediador en la fusión con la mem-
estaciones. Durante el siglo XX se presenta- brana de las células del huésped y la inyec-
ron tres pandemias, en 1918, 1957 y 1958, ción del virus en el citoplasma.
con un número de muertes mayor a 30 millo-

1133
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La neuraminidasa rompe la membrana de las tiene estrecha relación con el virus de influen-
células del receptor y favorece la liberación za tipo B y con el uso de aspirina, de forma
de viriones para infectar a otras células. especial en niños.

La excreción del virus termina 2-5 días des-


pués de la aparición de los síntomas EXAMENES DIAGNÓSTICOS
La infección por influenza se puede diagnos-
CUADRO CLÍNICO ticar con pruebas como la inhibición de la he-
maglutinación para detectar anticuerpos du-
El período de incubación es de 48 horas des- rante la infección aguda. Se puede llegar a
pués del contagio. un diagnóstico más temprano si se detectan
por inmunofluorescencia antígenos del virus
Los síntomas más frecuentes son fiebre, tos, obtenido de secreciones nasales. Para la iden-
dolor de garganta, cefalea, mialgias y malestar tificación de subtipos del virus se usa el culti-
general pronunciado. El comienzo es brusco vo. Ninguna de estas pruebas se realiza en el
con instauración rápida del cuadro. La tempe- contexto de la atención de urgencias.
ratura se eleva rápidamente durante las prime-
ras 24 horas. Puede haber síntomas oculares El diagnóstico diferencial se hace con otras
como dolor, fotobia y ardor en los ojos. La ma- causas de infección respiratoria aguda.
yoría de los pacientes se recupera completa-
mente en una semana.
TRATAMIENTO
El diagnóstico es clínico en 80% de los casos.
La tos y la fiebre son los síntomas que mayor El tratamiento consiste fundamentalmente en re-
correlación tienen con el diagnóstico apropia- poso en cama, administración de líquidos y cui-
do de la enfermedad. El valor predictivo posi- dados de soporte, sobre todo en pacientes per-
tivo de la asociación de tos y fiebre durante tenecientes a grupos de alto riesgo. Se sugiere
un período conocido de influenza es de 79%. acetaminofén 500 mg por vía oral cada 6 horas
La fortaleza de esta asociación aumenta cuan- para disminuir la fiebre y el malestar general.
do el nivel de la fiebre se hace más alto (Mon-
to et al). Los medicamentos antivirales disminuyen la
gravedad y la duración de la enfermedad en
En el examen físico no suelen encontrarse sig- 1-2 días.
nos de enfermedad aparte de congestión farín-
gea y algo de fiebre. Los pacientes con factores de riesgo para
desarrollar infección grave y complicaciones
Si se compara con otras causas de infección por influenza pertenecen a uno o más de los
respiratoria aguda, la influenza produce un siguientes grupos:
número mayor de complicaciones como neu-
monía, en especial en niños y personas an- • Mayores de 65 años.
cianas. • Inmunosupresión.
• Enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
El síndrome de Reye, caracterizado por ence- • Insuficiencia cardíaca congestiva.
falopatía, esteatosis hepática e hipoglucemia • Asma.

1134
CAPÍTULO XIV: INFLUENZA

En la siguiente tabla aparecen los medicamen-


tos disponibles para el tratamiento de la in-
fección por influenza:

Nombre Tipo de virus Dosis Ruta Duración (días) Efectos secundarios


Amantadina A 100 mg bid Oral 5 Insomnio, pesadillas
Oseltamivir AyB 75 mg bid Oral 5 Náusea, vómito
Zanamivir AyB 10 mg bid Inhalado 5 Náusea, vómito

El tratamiento antiviral debe ofrecerse si el PRONÓSTICO


paciente tiene fiebre y tos, está en las prime-
ras 48 horas de enfermedad y hay evidencia La mayoría de los pacientes se recuperan sin
de influenza en la comunidad. secuelas. La tasa de mortalidad en casos de
infección complicada puede llegar a 15%, es-
pecialmente en ancianos con enfermedades
PREVENCIÓN pulmonares y cardíacas crónicas.

La exposición al virus de la gripe por infección


o vacunación conduce a resistencia temporal LECTURAS RECOMENDADAS
contra la reinfección por el mismo tipo de virus.
1. Bridges CB, Thompson WW, Meltzer MI, et al.
El virus de la influenza cambia continuamen- Effectiveness and cost-benefit of influenza
te con el tiempo, lo que le permite evadir el vaccination of healthy working adults: A randomi-
zed controlled trial. JAMA 2000; 284:1655-1663.
sistema inmune. Los cambios rápidos en los
2. Carman WF, Elder AG, Wallace LA, et al. Effects
serotipos más frecuentes del virus hacen ne-
of influenza vaccination of health-care workers on
cesario el cambio anual de la composición de mortality of elderly people in long-term care: a ran-
la vacuna frente a influenza. domised controlled trial. Lancet 2000; 355:93-97.
3. Jefferson TO, Demicheli V, Deeks JJ, Rivetti D.
La vacunación anual se recomienda para per- Amantadine and rimantadine for preventing and
sonas mayores de 65 años, con enfermeda- treating influenza A in adults. Cochrane Database
des cardíacas, pulmonares, renales y hepáti- Syst Rev 2001; CD001169.
cas crónicas. 4. Monto A, Gravenstein S, Elliot M. Clinical signs
and symptoms predicting influenza infection. Arch
Intern Med 2000; 160:3243-3247.
Para evitar la enfermedad en personas de alto
5. Nicholson KG, Aoki FY, Osterhaus AD, et al.
riesgo de complicaciones que han estado ex- Efficacy and safety of oseltamivir in treatment of
puestas a individuos con influenza, se pue- acute influenza: a randomized controlled trial.
den utilizar drogas antivirales. La amantadina Neuraminidase Inhibitor Flu Treatment Investigator
y la rimantidina son igualmente efectivas. Group. Lancet 2000; 355:1845-1850.

1135
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

6. Treanor JJ, Hayden FG, Vrooman PS, et al. 8. Welliver R, Monto AS, Carewicz O, et al.
Efficacy and safety of the oral neuraminidase Effectiveness of oseltamivir in preventing influen-
inhibitor oseltamivir in treating acute influenza: a za in household contacts: a randomized controlled
randomized controlled trial. US Oral Neura- trial. JAMA 2001; 285:748-754.
minidase Study Group. JAMA 2000; 283:1016- 9. Zambon M, Hays J, Webster A, et al. Diagnosis of
1024. influenza in the community: relationship of clinical
7. Stiver G. The treatment of influenza with antiviral diagnosis to confirmed virological, serologic, or
drugs. CMAJ 2003; 168: 149-157. molecular detection of influenza. Arch Intern Med
2001; 161:2116-2122.

1136
CAPÍTULO XV: PROSTATITIS BACTERIANA AGUDA

CAPÍTULO XV

Prostatitis bacteriana aguda

Dieter Traub, MD
Urólogo
Clínica del Country
Colsubsidio
Hospital Central de La Policía

Hugo López Ramos, MD


Residente de Urología
Pontificia Universidad Javeriana
Bogotá

DEFINICIÓN ETIOLOGÍA

L a prostatitis bacteriana aguda es una in-


fección generalizada de la glándula prostá-
tica asociada con infección del tracto urinario
UROPATÓGENOS GRAM NEGATIVOS

La causa más común de la prostatitis la cons-


bajo y, eventualmente, sepsis diseminada. tituye la familia de las enterobacterias. El mi-
croorganismo más común es Escherichia coli,
el cual se encuentra en 65% a 80% de las
EPIDEMIOLOGÍA infecciones. Pseudomonas aeruginosa, Serra-
tia species, Klebsiella species y Enterobacter
Es el diagnóstico urológico más común en aerogenes se identifican en 10-15%.
hombres menores de 50 años y el tercero en
frecuencia en los mayores de 50, represen- Las bacterias residen en la profundidad de los
tando el 8% de las consultas urológicas. ductos de la glándula prostática, y cuando son
sometidas a terapia antimicrobiana tienden a
Los estudios epidemiológicos confirman que formar agregados (también llamados biofilms),
la prostatitis afecta a hombres de todas las que ejercen un mecanismo protector que les
edades. permite persistir en la glándula prostática a
pesar del tratamiento antibiótico.

HISTOPATOLOGÍA BACTERIAS GRAM POSITIVAS

Se caracteriza por un aumento en el número Los enterococos son los responsables del 5%
de células inflamatorias dentro del parénquima al 10% de las infecciones prostáticas. El pa-
prostático. Se encuentran leucocitos polimor- pel de otros organismos Gram positivos co-
fonucleares en la luz glandular, en los conduc- mensales de la uretra anterior es contro-
tos, en el epitelio y en su estroma adyacente. versial.

1137
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FACTORES DE RIESGO CLASIFICACIÓN


Los factores de riesgo incluyen el reflujo intra- El sistema de clasificación NIH (National
prostático de orina, la fimosis, grupos sanguí- Institutes of Health) para propósitos investiga-
neos específicos, el coito anal no protegido, tivos es el siguiente:
la infección urinaria, la epididimitis aguda, el
uso de sonda uretral a permanencia y drenaje Categoría I Prostatitis bacteriana aguda
con bolsa-condón y la cirugía transuretral, Categoría II Prostatitis bacteriana crónica
especialmente en hombres con infección uri- Categoría III Síndrome de dolor pélvico crónico
naria no tratada. Categoría IIIA Prostatitis abacteriana
(Inflamatoria)
Categoría IIIB Prostatodinia
FISIOPATOGENIA (no Inflamatoria)
Categoría IV Prostatitis inflamatoria asinto-
Reflujo ductal intraprostático: ha sido postu- mática
lado como uno de los mecanismos etiológicos
más importantes en la patogénesis de la in-
flamación prostática. PRESENTACIÓN CLÍNICA
La disfunción secretoria de la próstata, carac- La prostatitis bacteriana aguda se caracteriza
terizada por alteración en la composición de por inicio súbito de dolor combinado con sín-
las secreciones prostáticas, puede ser diag- tomas irritativos y obstructivos del tracto uri-
nóstica en los pacientes con prostatitis; es nario bajo en pacientes con manifestación de
decir, una disminución en los niveles de fructo- una enfermedad sistémica febril.
sa, ácido cítrico, fosfatasa ácida, los cationes
zinc, magnesio y calcio y el factor antibacte- El paciente refiere frecuencia urinaria, urgen-
riano prostático. Estas alteraciones de la se- cia y disuria. Los síntomas obstructivos inclu-
creción prostática afectan adversamente su yen intermitencia, chorro débil e interrumpido
naturaleza antibacteriana. e incluso retención urinaria aguda. Hay dolor
perineal y suprapúbico que puede asociarse
Disfunción miccional: la obstrucción anatómi- con dolor en los genitales externos; además,
ca y neurofisiológica que genera patrones de se acompaña de síntomas sistémicos que in-
flujo disfuncional de alta presión ha sido impli- cluyen fiebre, escalofríos, adinamia, náuseas,
cada en la patogénesis de la prostatitis. Los vómito e incluso manifestarse como un cuadro
estudios urodinámicos confirman que muchos séptico. La combinación y severidad de los
pacientes tienen disminución en el flujo urina- síntomas varía de paciente a paciente.
rio máximo con patrones obstructivos. En la
videourodinamia se ha encontrado apertura
incompleta del cuello vesical en algunos pa- EVALUACIÓN DEL TRACTO
cientes. Así mismo, estas presiones altas con- URINARIO INFERIOR
ducen a un reflujo ductal intraprostático en
individuos susceptibles. Examen físico: el paciente puede estar sépti-
co, febril, taquicárdico, taquipneico e incluso
hipotenso. Usualmente presenta malestar su-
prapúbico y retención urinaria. El examen

1138
CAPÍTULO XV: PROSTATITIS BACTERIANA AGUDA

rectal digital puede ser difícil por el espasmo sente un absceso prostático, el tratamiento
del esfínter rectal y el dolor perineal. La prós- antibiótico es exitoso en erradicar las bacte-
tata aparece caliente, blanda y muy dolorosa. rias y curar al paciente que acude con prosta-
titis bacteriana aguda.
En la prostatitis aguda el masaje prostático
está contraindicado, por ser muy doloroso y Muchos expertos sugieren la terapia inicial con
porque ocasiona bacteremia. antibióticos parenterales, seguidos por antibió-
ticos orales de amplio espectro. El tratamiento
antibiótico de la prostatitis bacteriana aguda
EXÁMENES PARACLÍNICOS es sencillo. La profunda inflamación dentro de
la próstata rompe la barrera hemato-prostática
El urocultivo es el único examen paraclínico y permite una mayor penetración de los anti-
del tracto urinario inferior que verdaderamente bióticos. Se ha demostrado que un 95% de
se requiere, y está destinado a identificar el las cepas son sensibles a imipenem, amino-
uropatógeno. El examen de orina muestra glicósidos, cefalosporinas y ciprofloxacina, y
leucocituria significativa, así como bacteriuria. que 83% de cepas son sensibles a trime-
toprim-sulfametoxazol.

TRATAMIENTO ANTIBIÓTICO Los criterios de hospitalización incluyen la pre-


sencia de enfermedades coexistentes, tales
Numerosos estudios en animales han eviden- como estado de inmunosupresión, enfermeda-
ciado que los antibióticos ácidos se encuen- des hepáticas, insuficiencia renal, patología
tran en bajas concentraciones en las secrecio- cardiaca o diabetes. Los pacientes con vómi-
nes prostáticas, mientras los antibióticos alca- to incoercible, deshidratación, retención urina-
linos exhiben concentraciones prostáticas ma- ria aguda o con catéteres uretrales de uso pro-
yores que las del plasma. Es difícil extrapolar longado deben recibir tratamiento intrahos-
los resultados de los estudios sobre farmacoci- pitalario.
nética. Infortunadamente los estudios de di-
fusión de medicamentos son difíciles de reali- Actualmente las fluoroquinolonas constituyen
zar en humanos, y muchos estudios determi- el tratamiento inicial de elección. Sin embargo,
nan la concentración de antibiótico en los ade- es aceptable el uso de amikacina, un amino-
nomas resecados por vía transuretral. glicósido con ampicilina o una cefalosporina.
Los pacientes con un menor compromiso sis-
Los numerosos estudios que evalúan las con- témico pueden recibir manejo ambulatorio con
centraciones de fluoroquinolonas en el tejido una fluoroquinolona o con trimetoprim-sulfa-
prostático han demostrado que la concentra- metoxazol.
ción en el adenoma es más alta que en el
plasma. Se recomienda el uso de antiinflamatorios no
esteroideos, baños de asiento y laxantes para
disminuir la sintomatología dolorosa.
INFORMACIÓN DE ESTUDIOS
CLÍNICOS La duración óptima del tratamiento no está
bien definida; se sugiere un periodo de 2 a 4
A menos que exista una anomalía anatómica semanas.
significativa del tracto urinario bajo o se pre-

1139
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ABSCESO PROSTÁTICO 3. Cox C. Ofloxacin in the management of complica-


ted urinary tract infections, including prostatitis. Am
J Med 1989; 87:61S-68S.
Aunque el absceso prostático es infrecuente,
4. Nickel J, Nigro M, Valiquette L, et al. Diagnosis
si los síntomas no resuelven prontamente se and treatment of prostatitis in Canada. Urology
debe considerar este diagnóstico. El absceso 1998; 52:797-802.
puede descartarse cuando en el examen rec- 5. Paulson D, Zinner N, Resnick M, et al. Treatment
tal digital se encuentre una próstata fluctuante. of bacterial prostatitis. Comparison of cephalexin
Se debe realizar ecografía prostática trans- and minocycline. Urology 1986; 27:379-87.
6. Wright E, Chmiel J, Grayhack J, et al. Prostatic
rectal o tomografía axial computadorizada. Si fluid inflammation in prostatitis. J Urol 1994;
se demuestra el absceso, debe practicarse 152:2300-2303.
drenaje quirúrgico por vía transuretral o trans- 7. Cheah PY, Liong ML, Yuen KH, et al. Chronic
perineal. prostatitis: symptom survey with follow-up clinical
evaluation. Urology 2003; 61:60-64.
8. Litwin MS. A review of the development and vali-
dation of the National Institutes of Health Chronic
LECTURAS RECOMENDADAS Prostatitis Symptom Index. Urology 2002;60:14-19.
9. Sperandeo G, Sperandeo M, Morcaldi M, et al.
1. Andreu A, Stapleton A, Fennell C, et al. Urovi- The prevalence of men with National Institutes of
rulence determinants in Escherichia coli strains Health category IV prostatitis and association with
causing prostatitis. J Infect Dis 1997; 176:1416- serum prostate specific antigen. J Urol 2003;
1422. 169:589-591.
2. Bennett B, Richardson P, Gardner W. Histología y 10. Turner JA, Ciol MA, Von Korff M, Berger R. Validity
citología de la prostatitis. En: Enfermedades de la and responsiveness of the national institutes of
Próstata. Editado por H Lepor, R Lawson. Edito- health chronic prostatitis symptom index. J Urol
rial Médica Panamericana. Bogotá,1994. 2003; 169:580-583.

1140
CAPÍTULO XVI: ESCABIOSIS

CAPÍTULO XVI

Escabiosis

Maria de los Ángeles Roversi, MD, MSc


Oficina de Recursos Educacionales,
Federación Panamericana de
Asociaciones de Facultades (Escuelas) de Medicina

Juan Guillermo Chalela, MD


Sección de Dermatología
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l nombre de esta afección proviene del


parásito que la origina, Sarcoptes scabiei,
que deriva del griego sarx: relámpago, kopetín:
El ácaro excava la epidermis del huésped con
sus mandíbulas y sus patas frontales y su
tiempo de vida es de 30 – 60 días; durante
cortante y del latin scabere: surco. este periodo la hembra deposita 3 huevos por
días y menos del 10% se tornan larvas madu-
El término escabiosis, se refiere a una patolo- ras que dejarán la piel.
gía cutánea que ha sido reconocida como una
enfermedad por mas de 2500 años. La esca- Una reacción de hipersensibilidad tipo IV de-
biosis fue definida por los Romanos como una bido al ectoparásito, a sus huevos o a sus
enfermedad pruriginosa de la piel; posterior- heces, ocurre aproximadamente a los 30 días
mente, en el siglo XVII, Giovanni Cosimo Bo- de la infestación y es la responsable del in-
nomo identificó al ácaro como el causante de tenso prurito característico de la enfermedad;
esta patologia. sin embargo, individuos que han sufrido una
infestación previa (sensibilizados) pueden
La escabiosis es una infestación cutánea de- manifestar la sintomatología en horas.
bida al ectoparásito Sarcoptes scabiei, de la
variedad hominis; se trasmite por contacto di-
recto con individuos afectados, siendo la infes- EPIDEMIOLOGÍA
tación también probable, aunque menos fac-
tible, a través del contacto con fomites o ropas La escabiosis se ha relacionado con la po-
contaminadas, donde el parásito se mantiene breza, hacinamiento y limitado acceso al agua.
viable de 2–5 días.
En países desarrollados se le considera una
Es posible la trasmisión del Sarcoptes scabiei epidemia que ocurre cada 7 a15 años y refle-
no hominis entre animal y hombre; este he- ja el estado inmunológico de la población. En
cho ha sido documentado en caballos, came- países subdesarrollados es una endemia que
llos, llamas, ovejas, zorros y más comúnmen- afecta millones de personas, sin predilección
te en perros; no obstante, esta infección es de sexo o raza. Es más común en niños (<15
autolimitada. años), inmunocomprometidos y ancianos

1141
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

institucionalizados, asociándose en adultos marrón, donde usualmente no se encuentran


jóvenes con contactos sexuales. parásitos.

Las lesiones secundarias ocurren principal-


DIAGNÓSTICO mente por rascado. Son excoriaciónes, eritro-
dermia o dermatitis eczematosa generaliza-
Historia clínica: antecedentes de prurito in- da. La piodermitis y el impetigo, son frecuen-
tenso, especialmente en las noches, y exacer- tes en niños.
bación de este síntoma que obliga al pacien-
te a buscar atención médica. Se debe inda-
gar la presencia de prurito en otros miembros DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
de la familia, compañeros sexuales y presen-
cia de mascotas. La escabiosis debe ser doiferenciada de der-
matitis atópica, dermatitis por contacto, derma-
Examen físico: se pueden observar lesiones titis herpetiforme, impétigo, picaduras de in-
primarias o secundarias. Las lesiones prima- sectos, dermatitis seborreica, psoriasis y sífi-
rias son en forma de túnel curvo, de 2-5 mili- lis entre otras.
metros de largo, ligeramente elevadas y de
color rosado. Un punto oscuro ubicado al final El diagnóstico es esencialmente clínico. Sin
de la lesión evidencia la presencia del ácaro. embargo, el diagnóstico definitivo se realiza
Las localizaciones más frecuente de estas le- raspando 6-7 veces la lesión con una hoja de
siones son: espacios interdigitales, superficies bisturí No. 11, evitando el sangrado; el material
flexoras de la muñeca, codo, axila, línea del obtenido se coloca en un portaobjeto con KOH
cinturón, pies, parte baja de la espalda, escro- y se examina con microscopio de luz con un
to en los hombres y la areola en la mujer. objetivo 40x para determinar la presencia de
Vesículas o pápulas pueden ser vistas cerca huevos, larvas o del propio ácaro.
de las lesiones primarias, además de lesio-
nes secundarias a rasguños o rascado. La Cuando se sospecha de escabiosis Noruega,
presencia de lesiones con apariencia de se debe añadir hidróxido de potasio al 10% al
impétigo sugieren infección bacteriana secun- material a ser examinado con el microscopio,
daria. sustancia que disminuye los restos de
queratina.
La escabiosis costrosa o escabiosis Norue-
ga es una forma atípica que ocurre en pacien- Otro examen que puede utilizarse es la deter-
tes inmunocomprometidos o en ancianos minación de inmunoglobulina E, que en estos
institucionalizados que son infectados por mi- de escabiosis se encuentra elevada.
les de parásitos y presentan lesiones hiper-
queratósicas poco pruriginosas. Esta forma de La histología de la lesión reporta el ácaro y
la enfermedad suele ser resistente al trata- sus huevos dentro del estrato córneo y un in-
miento y por consiguiente fuente de continua filtrado inflamatorio compuesto por linfocitos,
infección. histiocitos, eosinófilos y ocasionalmente neu-
trófilos. En la escabiosis Noruega se encuen-
La escabiosis nodular ocurre en 7–10 % de tra una hiperqueratosis con infiltrado inflama-
los pacientes infestados y se manifiesta en for- torio e innumerables parásitos. En la esca-
ma de nódulos que varían de color rosa a biosis nodular hay un denso infiltrado inflama-

1142
CAPÍTULO XVI: ESCABIOSIS

torio mixto alrededor de los vasos sanguíneos Otros medicamentos


de la dermis y grasa subcutánea, siendo la Antihistamínicos, en caso de prurito intenso.
presencia de ácaros infrecuente. Antibióticos, cuando se comprueba sobre-
infección o impétigo de las lesiones.

TRATAMIENTO
RECOMENDACIONES
El objetivo del tratamiento es eliminar el pará-
sito y disminuir la sintomatología. Todos los La ropa, sábanas y toallas deben ser lavadas
miembros de la familia y contactos cercanos con agua caliente y luego expuestas al sol al
deben recibir tratamiento. tiempo que se aplica el tratamiento médico.

1. ANTIPARASITARIOS
LECTURAS RECOMENDADAS
Uso tópico
a. Permetrina crema al 5% en adultos y ni- 1. Angel TA, Nigro J, Levy ML. Infestations in the
ños mayores de dos meses se aplica en pediatric patient. Pediatr Clin North Am 2000;
todo el cuerpo y se deja actuar por 12 ho- 47:921-935.
2. Chosidow O. Scabies and pediculosis. Lancet
ras. Este procedimiento debe repetirse en
2000; 355:819-26.
una semana. 3. Chouela E, Abeldano A, Pellerano G, Hernandez
b. Lindane 1% en loción o crema, sólo reco- MI. Diagnosis and treatment of scabies: a practical
mendado en adultos; se aplica una capa guide. Am J Clin Dermatol 2002; 3:9-18.
fina que se deja actuar por 10 horas, repi- 4. Chouela EN, Abeldano AM, Pellerano G, et al.
tiendo la dosis en una semana. Puede cau- Equivalent therapeutic efficacy and safety of
sar neurotoxicidad, aunque es rara. ivermectin and lindane in the treatment of human
scabies. Arch Dermatol 1999; 135:651-655.
c. Crotamitón en crema o loción al 10%, se
5. Giudice P. Ivermectin in scabies. Curr Opin Infect
aplica en todo el cuerpo durante dos no- Dis 2002 ;15:123-126.
che consecutivas, retirando el medicamen- 6. Mahe A. Bacterial skin infections in a tropical
to con agua a las 24 horas de la última apli- environment. Curr Opin Infect Dis 2001; 14 :123-
cación. Este medicamento es recomenda- 126.
do en niños y mujeres embarazadas. 7. Tuzun B, Saygin A, Wolf R, Ozdemir M, Tuzun Y
.Anogenital lesions (viral diseases and
Vía Oral ectoparasitic infestations): unapproved treatments.
Clin Dermatol 2002; 20: 668-671.
La ivermertina actúa a nivel del SNC del pará-
8. Walton SF, McBroom J, Mathews JD, Kemp DJ,
sito, y la dosis es de 9-18 mg- vía por vía oral, Currie BJ. Crusted scabies: A molecular analysis
en dos tomas separadas por una semana. Esta of Sarcoptes scabiei variety hominis populations
droga se usa cuando la medicación tópica es from patients with repeated infestations. Clin Infect
difícil, como en infecciones diseminadas, en Dis 1999; 29:1226-1230.
ancianatos o en instituciones similares.

1143
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVII

Tétanos

José Félix Patiño, MD, FACS (Hon)


Profesor Honorario de Cirugía, Universidad Nacional de Colombia
Jefe Honorario, Departamento de Cirugía, Fundación Santa Fe de Bogotá

E l tétanos, una enfermedad descrita por los


antiguos egipcios, es una grave y frecuen-
temente mortal infección anaeróbica produci-
En Colombia, aunque se ha logrado una re-
ducción, el tétanos no es una enfermedad to-
talmente erradicada y todavía es importante
da por la neurotoxina del Clostridium tetani, mi- el número de casos que se registra, especial-
croorganismo que prolifera en tejidos trauma- mente en determinadas regiones, donde la en-
tizados hipóxicos, desvitalizados y contami- fermedad es endémica y se asocia con eleva-
nados con tierra y excrementos. A pesar de los da mortalidad. Hay que tener en cuenta, ade-
esfuerzos por erradicar esta enfermedad, to- más, que se reconoce un subregistro impor-
davía tiene una incidencia significativa en los tante.
países del tercer mundo. Sin embargo, en los
países desarrollados también se presenta el En Colombia la incidencia del tétanos ha sido
tétanos: en 2002 la Clínica Mayo informó 26 la siguiente, según datos de la doctora Martha
pacientes atendidos en los últimos 25 años Velandia del Instituto Nacional de Salud:
(Bunch et al 2002). En consecuencia, el téta-
nos persiste como un problema global de salud.

CASOS POR MUNICIPIO

Año Mpios. con casos No. de casos


1998 67 140
1989 67 160
1990 114 158
1991 102 142
1992 54 75
1993 47 67
1994 40 54
1995 29 37
1996 22 26
1997 22 24
1998 18 20
1999 14 19
2000 10 10
2001 9 9
2002 9 9

1144
CAPÍTULO XVII: TÉTANOS

Las lesiones traumáticas, contaminadas y des- queo y la pérdida funcional de las neuronas
vitalizadas de los tejidos blandos se denomi- inhibitorias hace que las neuronas motoras
nan heridas tetanógenas, o sea que son las incrementen el tono muscular, lo cual se tra-
de alto riesgo de desarrollar tétanos. En los duce en rigidez y espasmo.
servicios de urgencias, especialmente en las
regiones rurales, se debe mantener una acti- La sintomatología depende de la distribución
tud alerta hacia el posible desarrollo de tétanos de la neurotoxina: se puede limitar a la mus-
luego de este tipo de heridas de alto riesgo. culatura de la extremidad lesionada (tétanos
local), de la cabeza (tétanos cefálico) o de
Heridas leves y superficiales también pueden todo el cuerpo (tétanos generalizado). Un
producir tétanos, y se han presentado casos informe reciente de la Clínica Mayo presenta
en que la causa no ha sido identificada. un caso de insuficiencia respiratoria que se
presentó con hipo, hipo tal vez debido a espas-
El agente etiológico es el Clostridium tetani, mos del diafragma (Bunch et al 2002). La for-
un bacilo anaeróbico, Gram positivo, formador ma clínica más común es la del tétanos gene-
de esporas, con forma de palillo de tambor, ralizado. La causa directa más frecuente de
que se encuentra normalmente en la tierra y muerte es la falla respiratoria.
en el tracto gastrointestinal de hombres y ani-
males. En su forma esporulada, el bacilo tetá- El tétanos es una enfermedad que debería ya
nico puede permanecer viable en la tierra por estar erradicada en nuestro país y en todo el
años. mundo. La profilaxis antitetánica y el buen
manejo de las heridas son los factores deter-
En los tejidos anóxicos y desvitalizados germi- minantes de su erradicación.
na y produce la tetanoespasmina, que es una
potente neurotoxina. Ésta penetra las fibras Teniendo en cuenta la notable eficacia, el
de los nervios motores periféricos y llega rá- toxoide tetánico, que es fácilmente asequible,
pidamente, en 16 a 24 horas, al sistema ner- es de gran efectividad en cuanto a la provi-
vioso central a nivel de la médula y el bulbo; sión de inmunidad prolongada.
afecta principalmente los pares craneanos V
y VII, por lo cual el trismo aparece como una En Colombia, el toxoide tetánico (antígeno te-
manifestación temprana. La presentación tem- tánico) es producido por el Instituto Nacional
prana, en menos de 48 horas, ocurre en los de Salud; también hay preparaciones comer-
casos de heridas graves. Los casos típicos ciales de excelente calidad (Tetanol, Anatoxal,
se desarrollan entre una y dos semanas des- etc.).
pués del accidente que causa la inoculación
del bacilo, pero se han informado casos en Pocos son los adultos que cumplen con el re-
que el tétanos se desarrolla hasta dos meses fuerzo de inmunización antitetánica con el antí-
después (Bunch et al 2002). geno tetánico después de que, de niños, se
les aplicó la “Vacuna Triple”.
La toxina tetánica se liga a las neuronas presi-
nápticas inhibitorias e impide la liberación de
acetilcolina por las terminaciones nerviosas en PROFILAXIS
el músculo. La progresiva disminución lleva a
un grado extremo de excitabilidad del siste- La profilaxis antitetánica, la cual se basa en
ma nervioso, incluyendo el autónomo. El blo- (Patiño 2001):

1145
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

1. Manejo quirúrgico de la herida, especial- La inmunización antitetánica activa con toxoi-


mente si se trata de una lesión susceptible de y pasiva con globulina antitetánica huma-
de desarrollar tétanos, o sea de una heri- na (TIG) debe cumplirse en todo caso de heri-
da tetanógena. das tetanógenas en pacientes que no hayan
Se denominan “heridas tetanógenas” las recibido dosis de refuerzo de su inmunización
lesiones con alto riesgo de desarrollar la antitetánica en los últimos cinco años. Si el
infección tetánica. Generalmente se reco- paciente está al día en su régimen de inmu-
nocen como tales las siguientes: nización con toxoide, no es necesario admi-
• Heridas producidas por armas de fuego nistrar toxoide ni globulina hiperinmune (TIG).
o pólvora (juegos pirotécnicos).
• Heridas penetrantes y profundas, las Debe recordarse que es la globulina hiperin-
ocurridas en particular en ambientes mune el agente que provee la inmunización
contaminados con excrementos. pasiva inmediata, y por ello ésta debe ser ad-
• Laceraciones contaminadas y tratadas ministrada en toda herida tetanógena en pa-
en forma inadecuada. cientes en quienes no exista certeza sobre su
• Lesiones dentales infectadas. estado de inmunización activa. La preparación
• Otitis supuradas. comercial de globulina humana hiperinmune
• Heridas que contienen cuerpos extraños actualmente disponible en Colombia es el Te-
tales como tierra, fragmentos de vidrio, tanum Berna (gammaglobulina antitetánica).
metal, madera, etc.
• Fracturas abiertas.
• Ulceras de decúbito. INMUNIZACIÓN ACTIVA
• Suturas con catgut contaminado.
• Quemaduras. El toxoide tetánico, o antígeno tetánico, pro-
• Suturas infectadas. vee inmunización activa. Se recomienda el
El manejo de la herida incluye lavado siguiente régimen de vacunación:
profuso, desbridación y resección de teji-
dos desvitalizados y remoción de cuerpos a) Toxoide 0,5 mL IM si el paciente no ha re-
y materiales extraños, utilizando técnicas cibido un refuerzo en los últimos 3-5 años.
rigurosamente asépticas. Aquellas heridas Teniendo en cuenta que el toxoide es un
antiguas y/o severamente contaminadas agente sensibilizante que puede provocar
deben dejarse abiertas. reacciones, la administración del toxoide
2. Inmunización activa (vacunación) con debe ser juiciosa, considerando el riesgo
toxoide tetánico (anatoxina tetánica). de la enfermedad contra la posibilidad de
3. Inmunización pasiva con globulina antite- una reacción.
tánica humana (GATH), también denomi- b) En individuos sin inmunización previa se
nada globulina tétano-inmune humana recomienda:
(TIG, tetanus inmune globulin human) o • Heridas limpias, frescas (menos de 24
globulina hiperinmune. horas) y menores, en las cuales la posi-
bilidad de desarrollar tétanos es remo-
La antigua antitoxina equina o bovina (suero ta: Toxoide 0,5 mL IM como dosis inicial
antitetánico), que producía serias reacciones de vacunación, con instrucciones escri-
anafilácticas y que era poco efectiva, ha sido tas para completar una segunda dosis
descartada, una vez que la globulina humana de 0,5 mL IM en 4-6 semanas y una ter-
tétano-inmune llegó a estar disponible. cera de 0,5 mL IM en 4-6 meses.

1146
CAPÍTULO XVII: TÉTANOS

• Heridas tetanógenas, o de alto riesgo, El opistótono, la rigidez abdominal y una gro-


son las de más de 24 horas, sucias, de tesca expresión facial denominada risus
bordes irregulares, con cuerpos extra- sardonicus son síntomas clásicos.
ños y tejidos necróticos: Toxoide 0,5 mL
IM como dosis inicial de inmunización Se pueden precipitar espasmos por causas
activa, junto con 250 unidades IM de glo- menores tales como un ruido súbito, una luz
bulina humana tétano-inmune (GATH, brillante o una corriente de aire. La afección
TIG), con jeringas diferentes y aplica- de los músculos respiratorios puede llevar a
das en lugares diferentes. Se completa falla respiratoria. Algunos pacientes presentan
el régimen de inmunización activa con disfunción del sistema nervioso autónomo, lo
0,5 mL IM de toxoide de 4-6 semanas y cual se manifiesta por taquicardia, hiperten-
0,5 mL IM de 6 meses a 1 año. sión, fiebre y diaforesis, manifestaciones que
son de difícil manejo.
En los pacientes que han sido inmunizados
(vacunados): Las complicaciones del tétanos incluyen neu-
• Heridas limpias: Toxoide 0,5 mL IM, como monía, trombosis venosa, embolismo pulmo-
dosis de refuerzo. Si en el curso del año el nar y fracturas de los huesos y de la columna
paciente terminó su vacunación o recibió vertebral causadas por las contracturas mus-
una dosis de refuerzo, no debe aplicarse culares.
toxoide tetánico, pues aun tiene suficiente
inmunidad activa. En cuanto al laboratorio diagnóstico, general-
• Heridas tetanógenas: Toxoide 0,5 mL IM, mente se presenta leucocitosis, siendo lo más
como dosis de refuerzo. Si en el curso del importante el cultivo anaeróbico del C. tetani.
año el paciente terminó su vacunación o Sin embargo, este cultivo es positivo apenas
recibió una dosis de refuerzo, no debe apli- en 30% de los casos (Bunch et al 2002).
carse toxoide tetánico, pues aún tiene su-
ficiente inmunidad activa. La globulina humana tétano-inmune (TIG)
• Pero si el paciente completó su vacuna- neutraliza la toxina tetánica en casos de téta-
ción más de 10 años atrás, se completa la nos establecido. La dosis debe ser de 3.000-
vacunación con el régimen de una dosis 6.000 unidades IM, inyectada preferiblemen-
adicional de 0.5 mL IM a las 4-6 semanas te en un lugar proximal al sitio de la herida. La
y una tercera dosis a los 6-12 meses. vida media de este anticuerpo es de tres se-
manas, por lo cual puede ser necesario repe-
tir la dosis.
CUADRO CLÍNICO Y TRATAMIENTO
DEL TÉTANOS ESTABLECIDO En el caso de tétanos establecido está indi-
cado el tratamiento con penicilina G acuosa
El cuadro clínico se caracteriza por: en dosis de 10-40 millones de unidades dia-
rias en bolos por vía intravenosa.
• Debilidad o contractura muscular generali-
zada, con trismus y severos espasmos Antibióticos que pueden ser utilizados como
generalizados. alternativa terapéutica son la eritromicina, la
• Opistótono y rigidez abdominal. tetraciclina, las cefalosporinas y el imipenem.
• Puede presentarse falla respiratoria, taqui-
cardia, hipertensión, fiebre y diaforesis. Medidas terapéuticas generales (Patiño 2001):

1147
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

a) El paciente debe ser protegido de estímu- • Bloqueo adrenérgico para hiperactividad


los súbitos, movimientos innecesarios y simpática.
cualquier excitación. • Marcapasos auricular para bradicardia re-
fractaria.
b) El diazepam (Valium) es el agente de pre- • Coloides si hay shock prolongado.
ferencia para el control de la hipertonicidad
y contractura musculares, fenómeno que Si no hay unidad de cuidado intensivo
en general es más pronunciado en los mús- disponible:
culos maseteros y en los de la extremidad
donde se halla la lesión. La dosis es de 10- • Diazepam o clorpromazina en grandes do-
20 mg cada 3-4 horas. sis para síntomas musculares.
• Traqueostomía para prevenir espasmo
c) Una vez que el paciente haya sido aneste- laríngeo y neumonitis de aspiración.
siado se coloca un tubo nasogástrico o na- • Alimentación nasogástrica y administración
soyeyunal para alimentación enteral. A tra- de líquidos.
vés del tubo pueden administrarse las do-
sis adicionales de diazepam. En los casos INMUNIZACIÓN ACTIVA
de íleo severo es necesario recurrir a la nu- PARA PREVENIR EL TÉTANOS
trición parenteral total.
En el niño se debe iniciar la inmunización ac-
d) En general se prefiere la curarización, lo tiva con toxoide adsorbido al cumplir los tres
cual implica ventilación mecánica. meses de edad, con tres inyecciones IM de
10 U Lf a intervalos de 4 a 6 semanas y de 4 a
Los agentes curarizantes más usados son la 6 meses.
d-tubo-curarina, 15-30 mg; el alcuronio, 10-
20 mg; el pancuronio (Pavulón) 4-8 mg hasta Para lograr la inmunidad, se requieren refuer-
cada 30 minutos. zos de toxoide adsorbido cada 10 años hasta
los 60 años; después de esta edad los refuer-
Medidas sintomáticas según necesidad: zos se deben administrar cada 5 años.
• Diazepam o clorpromazina para hipertoni-
cidad muscular. No se debe plantear límite superior de edad
• Cuidadosa higiene bucal para trismus. para la inmunización contra el tétanos, y has-
• Intubación oral seguida de traqueostomía ta las personas de muy avanza edad, 75 ó
formal para disfagia. más años, deben recibir inmunización prima-
• Parálisis terapéutica y ventilación mecáni- ria y refuerzos cada 10 años. Precisamente
ca para espasmo muscular. son las personas de mayor edad las que pre-
• Sedación leve y analgésica y soporte emo- sentan las más altas de mortalidad. La morta-
cional para ansiedad. lidad global es de 20% a 30%, pero es supe-
• Soporte nutricional de preferencia por tubo rior al 50% en los mayores de 60 años.
nasogástrico o nasoyeyunal, pero por vía
parenteral si hay íleo. INMUNIZACIÓN PASIVA
• Reemplazo de líquidos por grandes pérdi-
das insensibles. Se logra una protección temporal con la in-
• Anticoagulantes para prevención de trom- yección de anticuerpos antitetánicos, para lo
bosis profundas. cual se utiliza la globulina antitetánica huma-

1148
CAPÍTULO XVII: TÉTANOS

na, también conocida como globulina humana La inmunización con toxoide tetánico (Tt) o
tétano-inmune (TIG) o globulina hiperinmune. con globulina tétanoinmune (TIG) depende de
la naturaleza de la herida y de la historia de la
Está en desuso la antitoxina equina (suero inmunización.
antitetánico), la cual produce severas reaccio-
nes anafilácticas. El Comité de Trauma del Colegio Americano
de Cirujanos (American College of Surgeons)
resume así el programa de inmunización
(Ross 1995; Lawrence et al 2002):

Historia de la Heridas Heridas


inmunización Tetanógenas no tetanógenas
(dosis de toxoide) Td1 TIG Td1 TIG

Se desconoce
o menos de 3 Sí Sí Sí No

3 o más2 No4 No No3 No

1. Para niños menores de 7 años: DPT (Td si existe contraindicación para la vacuna contra tos ferina, pertussis) es preferible
frente al toxoide tetánico solo. Para mayores de 7 años, el Td es preferible frente al toxoide tetánico solo.
2. Si sólo se han recibido 3 dosis de toxoide tetánico fluido, se debe administrar una cuarta dosis de toxoide, de preferencia un
toxoide adsorbido.
3. Sí, si han transcurrido más de 10 años desde la última dosis.
4. Sí, si han transcurrido más de 10 años desde la última dosis (no se requieren refuerzos con mayor frecuencia, y éstos pueden
incrementar los efectos secundarios).

VACUNAS Y PRODUCTOS BIOLÓGICOS Vacunación primaria: dos inyecciones IM de


1 mL cada una, con un intervalo de 28 días, y
Las preparaciones para profilaxis del tétanos una tercera dosis de 1 mL a un año; dosis de
disponibles en Colombia son: vacunas para refuerzo cada 5 años.
inmunización activa (toxoide antitetánico),
globulina antitetánica humana para inmuniza- • Tetanol (Hoechst Colombiana, S.A.).
ción pasiva (globulina tétano-inmune, TIG) y Cada dosis de 0,5 mL contiene 40 UI de
la controvertida antitoxina animal (suero equi- toxoide adsorbido. Vacunación primaria:
no antitetánico), la cual está en desuso. dos inyecciones IM de 0,5 ml cada una, con
intervalo de 4-8 semanas, y una tercera
a) Vacunas para inmunización activa. dosis de 0,5 mL a los 6-12 meses. Dosis
• Toxoide tetánico (Instituto Nacional de de refuerzo cada 5-10 años.
Salud).
• Tetavax (Pasteur Merieux Serums & Vaccins).
Cada dosis (ampolla de 1 mL) contiene 8 Lf/ Cada dosis de 0,5 mL contiene 40 UI de
mL de toxoide tetánico adsorbido. toxoide tetánico adsorbido. Vacunación

1149
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

primaria: dos o tres inyecciones de 0,5 mL b) Inmunización pasiva. Globulina antitetáni-


cada una con un mes de intervalo, sin ex- ca humana (GATH) para inmunización
ceder 6 meses. Refuerzo de 0,5 mL un año pasiva:
después de la primovacunación y luego
cada 10 años. • Tetuman Berna (Productos Berna).
Cada 1 mL contiene 125 UI de gamma-
• Anatoxal TE Berna (Productos Berna). globulina antitetánica humana. Su presen-
Cada dosis de 0,5 mL contiene 20 Lf de tación es en ampollas de 2 mL (250 UI).
toxoide adsorbido.
Se utiliza el mismo régimen de las prepa- PROFILAXIS DEL TÉTANOS NEONATAL
raciones anteriores
En regiones donde el tétanos neonatal cons-
• Vacunas triples. tituya un problema de salud pública, se debe
Además de las preparaciones de toxoide realizar la vacunación de la madre con dos
tetánico, se hallan en el mercado las Vacu- inyecciones de toxoide en el curso del emba-
nas Triples para inmunización simultánea razo. Los anticuerpos atraviesan la placenta
contra difteria, tétanos y tos ferina, como y confieren inmunidad al bebé hasta por los
la Vacuna Triple DPT del Instituto Nacional primeros 6 meses de la vida.
de Salud, que contiene toxoide diftérico (25
Lf/mL), toxoide tetánico (6 Lf/mL) y micro-
organismos muertos de B. pertussis. LECTURAS RECOMENDADAS
La primovacunación consiste en la aplica-
ción de tres inyecciones (IM profunda) de 1. Bunch TJ, Thalji MK, Pellika PA, Aksamit TR.
1 mL con intervalos de 28 días; la edad Respiratory failure in tetanus. Chest 2002;
122:1488-1492.
ideal para la primovacunación está com-
2. Diaz L. Profilaxis antitetanica posterior al trauma.
prendida entre los 3 y los 6 meses de edad. Med UIS 1998;12:24-27.
La inmunidad después de la vacunación 3. Lawrence T, Bevin AG, Sheldon GF. Acute wound
primaria persiste por 2-3 años para la dif- care. En: ACS Surgery. Principles and Practice.
teria y la tos ferina y por 10 años para el Edited by DW Wilmore et al. American College of
tétanos. Por ello se recomienda una inyec- Surgeons. WebMD Corporation. New York, 2002.
4. Oladiran I, Meier DE, Ojelade AA, et al. Tetanus:
ción de refuerzo de DPT al año y hacia los continuing problem in the developing world. World
5-6 años, con el ingreso escolar; no se debe J Surg 2001; 26:1282-1285.
aplicar después de los 7 años. 5. Patiño JF. Tétanos. En: Lecciones de Cirugía, por
Los anteriores datos sobre inmunización JF Patiño. Editorial Médica Panamericana. Bogo-
con vacuna triple deben ser tenidos en tá, Buenos Aires, 2001.
6. SE Ross. Prophylaxis against tetanus in wound
cuenta cuando se enfrente una herida, a management. American College of Surgeons,
fin de tomar una decisión racional en un Committee on Trauma. Chicago, 1995.
asunto de tanta trascendencia como la pro- 7. Velandia M. Instituto Nacional de Salud. Comuni-
filaxis antitetánica. cación personal, 2003.

1150
CAPÍTULO XVIII: NEUMONÍA ADQUIRIDA EN LA COMUNIDAD

CAPÍTULO XVIII

Neumonía adquirida en la comunidad

Rafael Acero Colmenares, MD


Jefe, Sección de Neumología
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

E n Colombia la neumonía es la cuarta cau-


sa de egreso hospitalario en personas
mayores de 60 años y es responsable de más
radiografía del tórax y hallazgos a la auscul-
tación compatibles con inflamación pulmonar
(estertores localizados o ruidos respiratorios
de 70.000 egresos anuales en todos los gru- alterados). Algunos síntomas están presentes,
pos de edad. La presencia de enfermedades como tos, expectoración, fiebre, escalofríos,
concomitantes (EPOC, enfermedades cardio- sudoración y disnea.
vasculares, diabetes mellitus, etc.) y el consu-
mo de alcohol son factores reconocidos de alto Diagnóstico clínico: los síntomas sugestivos
riesgo para el desarrollo de esta enfermedad. de neumonía son fiebre, tos y expectoración,
La mortalidad va desde el 4% hasta más del frecuentemente acompañados de disnea y do-
70%, según el estado general de salud previo lor pleural. Los pacientes ancianos general-
del individuo, de la severidad del compromiso mente presentan menos síntomas o son apa-
pulmonar y sistémico y de la presencia de al- rentemente menos severos que en los pacien-
gunos gérmenes reconocidos. tes jóvenes. La fiebre se encuentra en apro-
ximadamente el 80% de los pacientes, el au-
El germen causal se identifica solamente en mento de la frecuencia respiratoria es típico
40-60% de los casos, siendo el Streptococcus (taquipnea, FR >20/min) y los signos de con-
pneumoniae el germen más frecuente, pre- solidación o de estertores alveolares se
sente en 10-30% de los casos; siguen en fre- perciben en 30 a 80% de los casos.
cuencia el Haemophilus influenzae, gérmenes
atípicos (Micoplasma pneumoniae, Chlamy- Radiografía del tórax: Este examen se debe
dea pneumoniae), virus, bacilos Gram negati- ordenar ante la sospecha de neumonía.
vos, Moraxella catarrhalis, Staphiloccocus
aureus, Pseudomona sp y Legionella sp. La prevalencia de neumonía en radiografías
en adultos varía desde el 3% en la consulta
externa hasta el 28% en el departamento de
DEFINICIÓN urgencias. Es necesario demostrar infiltrados
pulmonares para la confirmación del diagnós-
Infección aguda del parénquima pulmonar que tico clínico de neumonía, pero se pueden en-
genera manifestaciones sistémicas y que se contrar falsos negativos en estados de deshi-
acompaña de infiltrados inflamatorios en la dratación, en etapas muy tempranas de la

1151
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

enfermedad, en neumonías por P. carinii y en sodio y potasio séricos, gases arteriales. Las
estados severos de neutropenia. Por consi- pruebas de función hepática son opcionales.
guiente, una radiografía no excluye el diag-
nóstico de neumonía. Líquidos corporales: al menos dos hemocul-
tivos de dos diferentes sitios de punción de-
Los cambios radiográficos son de gran utilidad ben tomarse en todo paciente hospitalizado
para definir la extensión de la enfermedad por una neumonía adquirida en la comunidad.
(lobar versus multilobar) y a menudo identifi- Estudios previos han demostrado que 11-20%
can algunas complicaciones, como el derrame de estos pacientes tienen hemocultivos
pleural, el empiema o el absceso pulmonar. positivos.
La tomografía axial computadorizada es más
sensible que la radiografía, ya que además Estudios serológicos: estudios serológicos
excluye algunos diagnósticos diferenciales y para Micoplasma pneumoniae, Chlamydea
muestra exactamente las posibles complica- pneumoniae y Legionella pneumophila, no se
ciones existentes; sin embargo no se reco- recomiendan en la evaluación rutinaria inicial,
mienda como parte del estudio rutinario de los pero pueden ser importantes para la vigilan-
pacientes con neumonía adquirida en la co- cia epidemiológica o en caso de epidemias.
munidad.
Determinación de antígenos: el elevado cos-
Esputo: el valor real del análisis rutinario por to, el tiempo requerido y la falta de especifici-
coloración de Gram y el cultivo de esputo han dad y sensibilidad han hecho que estos méto-
sido debatidos ampliamente y su verdadera dos sean poco utilizados. Su utilidad está de-
utilidad es dudosa, pero siendo un procedi- finida específicamente para el S. pneumoniae
miento simple y de poco costo se recomienda y para virus respiratorios (influenza, sincitialtial
en todos los casos. Si el paciente tiene más respiratorio, adenovirus, parainfluenza) con
de un mes de tos o hay sospecha radiológica sensibilidades por encima de 80%.
de tuberculosis se debe hacer baciloscopia y
cultivo para BK. Estudios invasores: incluyen broncoscopia,
lavado broncoalveolar y cepillado. La broncos-
Se debe revisar la calidad de la muestra de copia es un método invasor, costoso y es prac-
esputo antes de realizar el cultivo y definir si ticada por especialistas, por lo cual no puede
se trata de un espécimen adecuado. Debe lle- recomendarse en forma rutinaria. Debe ser
nar los siguientes criterios: menos de 10 cé- utilizada solamente en pacientes que han sido
lulas epiteliales escamosas por campo y más admitidos a cuidado intensivo, en neumonías
de 25 neutrófilos polimorfonucleares por cam- extensas, en pacientes que no están respon-
po (X100). diendo a la terapia antibiótica establecida o
cuando se sospecha tuberculosis o Pneumo-
El esputo permite establecer el agente etioló- cistis y no se pueden obtener muestras ade-
gico de la neumonía en 30 a 40% de los casos. cuadas de esputo o continúa la sospecha a
La presencia de una coloración negativa para pesar de ser negativas.
gérmenes sugiere la presencia de gérmenes
atípicos. La utilidad de la broncoscopia es variable, se-
gún la técnica y el germen responsable de la
Exámenes generales: hemograma, glicemia, infección. Los aspirados bronquiales obteni-
creatinina, BUN (nitrógeno uréico sanguíneo), dos por el canal del broncoscopio están

1152
CAPÍTULO XVIII: NEUMONÍA ADQUIRIDA EN LA COMUNIDAD

contaminados por la flora de la cavidad oral. mo facilidad de manejo y control en casa,


Para el estudio de bacterias comunes, se re- presencia de otras enfermedades, etc.
comienda el uso del lavado broncoalveolar Cuando existen múltiples factores de
(BAL). riesgo, se recomienda la hospitalización
(Tabla 2).
2. La selección del antibiótico generalmente
TRATAMIENTO tiene que ser empírica. Su elección se basa
en estudios que muestran que los gérme-
1. No hay criterios que permitan definir con nes varían según las características del pa-
certeza si el paciente se debe hospitalizar ciente y la severidad de la infección (Tablas
y la decisión se debe tomar de acuerdo a 3 y 4).
los factores de riesgo y pronóstico (Tabla 3. La demora en iniciar tratamiento antibióti-
1); pero 25 a 50% de las hospitalizaciones co por más de 8 horas se refleja en mayor
se ven influidas por factores diferentes, co- mortalidad.

TABLA 1. FACTORES RELACIONADOS CON COMPLICACIONES Y MUERTE

COMORBILIDAD Y • EPOC, bronquiectasias, fibrosis quística


ENFERMEDADES ASOCIADAS • Diabetes mellitus
• Falla renal crónica
• Falla cardiaca congestiva
• Enfermedad hepática crónica
• Hospitalización en el año anterior
• Sospecha de broncoaspiración
• Estado de conciencia alterado
• Alcoholismo y desnutrición
• Esplenectomía

SIGNOS Y SÍNTOMAS • Frecuencia respiratoria >30/min.


• Hipotensión (sist < 90 mm - diast <60 mm)
• Temperatura >38,3° C
• Infección extrapulmonar (meningitis, artritis)
• Alteración de conciencia

EXÁMENES PARACLÍNICOS • Leucocitos >30 x 109/l ó <4 x 109/l


• Neutropenia (total neutrófilos <1 x 109)
• PaO2 <50 mmHg y/o PaCO2 >40 mmHg con FIO2 100%
• Necesidad de ventilación mecánica
• Función renal anormal (creatinina >1,2 mg/dL, BUN >28mg/dL)
• Radiología: compromiso multilobar, cavitación, derrame pleural o pro-
gresión rápida de los infiltrados.
• Anemia (Hcto <30%, Hb < 9 gm/dL).
• Evidencia de sepsis o falla orgánica: (acidosis metabólica, PT o PTT
prolongado, trombocitopenia)

1153
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 2. CLASIFICACIÓN DE LA NEUMONÍA Y DECISIÓN DE HOSPITALIZACIÓN

GRUPO CARACTERÍSTICAS
I Pacientes sin comorbilidad y sin factores de riesgo que pueden ser tratados ambulatoriamente
II Pacientes con comorbilidad que no tienen factores de riesgo y pueden ser tratados ambulatoriamente.
III Pacientes con multiples factores de riesgo o comorbilidad; deben hospitalizarse
IV Pacientes que requieren admisión a cuidado intensivo. Paciente s con un criterio mayor o dos criterios
menores (Sensibilidad 82%, especificidad 91%)
CRITERIOS MENORES: TA sistólica <90 mmhg, multilobar, Pao2/FiO2 <250.
CRITERIOS MAYORES: Ventilación mecánica, shock séptico, falla renal
V Situaciones especiales que modifican la selección del antibiótico:
- Alergia a penicilina
- Sospecha de neumococo resistente a penicilina
- Sospecha de broncoaspiración
- Bronquiectasias.

TABLA 3. GERMEN PROBABLE Y CARACTERÍSTICAS DEL PACIENTE

FACTORES PREDISPONENTES GERMEN


Cuidado Intermedio, Enf. Cardiovascular, Epoc, Insuf. Renal, Diabetes, Bacilos gram negativos
Enf. Neurológica Crónica, Malignidad, Antibiótico Reciente
Bronquiectasias, corticoides (>10 mg/día), antibiótico de amplio espectro Pseudomona aeruginosa
(>7 días mes anterior), desnutrición
> 65 años, B-lactámicos en 3 meses anteriores, alcoholismo, comorbilidad Neumococo resistente
médica múltiple
Diabetes, Insuf. Renal, Cuidado Intermedio, Obstrucción Vía Aérea, Staphilococcuso aureus
Daño Estructural, Influenza, Drogas IV
Alcoholismo, Dentadura Mal Estado, Cuidado Intermedio, Obstrucción Anaerobios
Vía Aérea, Drogas IV
Exposición: Murciélagos, Pájaros (chlamydia psitaci), Gatos (Coxiella burnetii), No usual
Conejos (Francisella tularensis).

TABLA 4. TRATAMIENTO ANTIBIÓTICO INICIAL

CLASIFICACIÓN GERMEN ANTIBIÓTICO


Ambulatorios, sin comorbilidad S. Pneumoniae, M. Pneumoniae, virus, Macrólido: claritomicina o
mortalidad 1 a 5% C. Pneumonia, H. Influenzae, azitromicina doxicilina
Legionella, TBC•
Ambulatorios con comorbilidad S. Pneumoniae, Mycoplasma sp., amoxacilina (alta dosis),
o factores modificantes Chlamydia p, h. Influenzae, BGN, virus amox/clav, ceftriaxona más
Mortalidad < 5% reingreso 20% M. Catarrhalis, legionella, TB macrólido o doxiciclinao o
quinolona antineumococo
Hospitalizado sin comorbilidad S. Pneumoniae, H. Influenzae, Macrólido IV: azitromicina o quinolona
ni factores modificantes Mycoplasma P., Chlamydia, antineumococo IV
mortalidad 5 a 25% virus, legionella

1154
CAPÍTULO XVIII: NEUMONÍA ADQUIRIDA EN LA COMUNIDAD

CLASIFICACIÓN GERMEN ANTIBIÓTICO


Hospitalizado con comorbilidad S pneumoniae, H. Influenzae, B-Lactámico IV: ceftriaxona,
o factores modificantes M. Pneumoniae, C. Pneumonia, BGN, cefotaxime, Amp/sulb másmacrólido
mortalidad 5 a 25 % Aspiración, Virus, Legionella o quinolona Antineumococo IV
UCI + riesgo pseudomona S pneumoniae, Legionella, H. B-Lactámico anti-Pseudomona: cefipima,
mortalidad > 50 % Influenzae, BGN, Staphilococcus a, imipenem, meropenem, amp/sulb
M. Pneumoniae, pseudomona (1a 5%) más Aminoglucósido IV más quinolona
o macrólido
Alergia a penicilina Quinolona nueva con o sin clindamicina
Sospecha de broncoaspiracion Quinolona nueva + clindamicinao
ampicilina/sulbactam, ticarcilna/
clavulanato, piperazilina/tazobactam
BGN: bacilos gram negativos.

TRATAMIENTO
Etiológico: la selección del antibiótico cuan- permanece igual o los infiltrados pueden
do el agente causal es conocido, se guía por aumentar un poco. Hacia el tercer día, la fiebre
las sensibilidades establecidas previamente desaparece, los glóbulos blancos disminuyen
en el centro médico u hospital; de no disponer y hay mejoría clínica.
de esta información, existen guías que esta-
blecen los medicamentos de primera y segun- En las primeras 72 horas, además de los anti-
da elección en cada germen determinado. bióticos, el manejo se basa en cuidados hemo-
dinámicos y respiratorios; no se deben cam-
Empírico: en la práctica clínica la mayoría de biar los antibióticos, a menos que se presente
los casos requiere un tratamiento inicial esco- un deterioro rápido y progresivo; se deben re-
gido en forma empírica. Las recomendaciones visar los cultivos y hacer un hemograma hacia
(Tabla 4) se basan en las características del el tercer día. Si en este momento la evolución
paciente (factores de riesgo), la severidad de no es adecuada, se debe revisar la sensibili-
la enfermedad y la presencia de situaciones dad del germen cultivado, pensar en gérme-
especiales y son diferentes en los pacientes nes que no estén cubiertos por el tratamiento
tratados ambulatoriamente. iniciado o resistentes, buscar complicaciones
y evaluar otros diagnósticos diferenciales
(TEP, cáncer, bronquiolitis, neumonías no in-
EVOLUCIÓN fecciosas). En este proceso se debe tomar una
nueva radiografía de tórax y si es necesario
La evolución de la neumonía se puede dividir una TAC y practicar broncoscopia para tomar
en tres periodos, uno inicial de estabilidad clí- cultivos y biopsia.
nica que ocupa las primeras 24 a 72 horas,
durante el cual se estabiliza la presión arterial, El periodo de resolución tarda 4 a 6 semanas,
disminuyen la taquicardia y la disnea; el pa- con mejoría del estado general, recuperación
ciente se siente mejor y comienza a bajar la de la función pulmonar y resolución de los in-
fiebre. En este periodo la radiografía de tórax filtrados en la radiografía del tórax.

1155
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DURACIÓN DE LA TERAPIA macrolide for the treatment of community-acquired


pneumonia. Chest 2001; 119:1439-1448.
Los pacientes ambulatorios y los hospitaliza- 5. Gray GC, Witucki PJ, Gould MT, et al. Randomi-
zed, placebo-controlled clinical trial of oral azithro-
dos sin comorbilidad que mejoran rápidamente
mycin prophylaxis against respiratory infections in
(2 a 3 días) se deben tratar por 7 a 10 días. a high-risk, young adult population Clin Infect Dis
Los casos de neumonía severa, cuando hay 2001; 33:983-989.
comorbilidad asociada o bacteremia, se deben 6. Guidelines for the initial management of adults with
tratar por 10 a 14 días, lo mismo que los neu- community-acquired pneumonia: Diagnosis,
monías por Mycoplasma y Chlamydia. assessment of severity and initial antimicrobial
therapy. Am. J Resp Crit Care Med 2001;
163:1730-1754.
7. Marrie TJ, Lau CY, Wheeler SL, et al. A controlled
LECTURAS RECOMENDADAS
trial of a critical pathway for treatment of
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Community acquired pneumonia In adults: guide- Investigators. Community-Acquired Pneumonia
lines for management. Guidelines from the Infec- Intervention Trial Assessing Levofloxacin. JAMA
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Simon S,et al.Efficacy and safety of oral and early- acquired pneumonia. Clin Infect Dis 2000;31:1362-
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4. Dresser LD, Niederman MS, Paladino JA. Cost- carinii pneumonia. Arch Intern Med 2001;
effectiveness of gatifloxacin vs ceftriaxone with a 161:1529-1533.

1156
CAPÍTULO XIX: ARTRITIS SÉPTICA

CAPÍTULO XIX

Artritis séptica

Jaime Pedraza, MD
Departamento de Ortopedia
Fundación Santa Fe de Bogotá

GENERALIDADES

L a artritis séptica es una verdadera urgen-


cia ortopédica. Existen tres posibles rutas
de invasión bacteriana al espacio articular:
debe considerarse la enfermedad de Legg-
Calve-Perthes.

La aparición de síntomas iniciales en una arti-


1. Siembra hematógena. culación debe alertar acerca de una artritis
2. Diseminación local de una infección vecina. séptica. Al diagnóstico debe llegarse por des-
3. Trauma o infección quirúrgica. carte. El mayor problema surge al realizar el
diagnóstico diferencial entre la artritis séptica
La duración de los síntomas antes del trata- y la sinovitis transitoria, ya que el cuadro clíni-
miento constituye el factor pronóstico más im- co puede tener presentación similar, pero el
portante. La artritis séptica puede ser diagnos- tratamiento de estas dos entidades es diferen-
ticada y tratada a tiempo. Una falla en el diag- te. Un niño irritable agudamente enfermo, con
nóstico produce alteración permanente de la signos y síntomas progresivos como fiebre,
función por destrucción del cartílago articular. cojera, imposibilidad para el apoyo, limitación
de los arcos de movimiento y hallazgos anor-
El diagnóstico diferencial incluye sinovitis transi- males de laboratorio, tiene artritis séptica has-
toria, fiebre reumática, hemartrosis, artritis juve- ta que se demuestre lo contrario.
nil, celulitis, osteomielitis, hemofilia, condrolisis,
leucemia, sinovitis villonodular y artritis reactiva. Existen cuatro factores clínicos de predicción
que ayudan a diferenciar la artritis séptica de
Las artritis reactivas han sido relacionadas con la sinovitis transitoria:
una variedad de bacterias infecciosas inclu-
yendo Borrelia burgdorferi, Chlamydia sp, Yer- 1. Historia de fiebre,
sinia sp, Salmonella sp, Shigella sp, Micoplas- 2. Imposibilidad para el apoyo,
ma sp y Campylobacter sp, así como virus, 3. Velocidad de sedimentación globular ma-
que incluyen el de la hepatitis A y B, rubeolla, yor de 40mm/h,
HIV, parvovirus B19, enterovirus y herpesvirus. 4. Recuento leucocitario mayor de 12,000 mm3.
La artritis reactiva puede ser difícil de diferen-
ciar de la infecciosa, aun en presencia de una Si tres factores son positivos, la posibilidad
adecuada historia clínica y un buen examen de artritis séptica es de 93,1%, y si los cuatro
físico. Si la cadera se halla comprometida están presentes, la posibilidad es de 99,6%.

1157
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

MICROBIOLOGÍA a la izquierda en 60%. La elevación de la ve-


locidad de sedimentación globular constituye
El Staphylococcus aureus es el agente cau- una de las pruebas más sensibles en los pa-
sal más frecuente, seguido del Estreptococo cientes con artritis séptica; sin embargo, es
del grupo A y el Streptococcus pneumoniae. irrelevante en neonatos o en pacientes en tra-
La terapia empírica recomendada actualmente tamiento con corticoides. El retorno a cifras
es una cefalosporina de tercera generación normales ocurre más lentamente que la remi-
hasta que se documente la susceptibilidad del sión de los signos clínicos.
germen causal.
La proteína C reactiva puede ser útil en la iden-
El Estreptococo beta hemolítico del grupo B tificación de niños que tienen osteomielitis y
es el agente más frecuente en neonatos. en los cuales se sospecha artritis séptica aso-
ciada. La disminución en el valor de la proteí-
La Neisseria gonorrhoeae puede aislarse de na C reactiva constituye un parámetro para el
articulaciones sépticas en neonatos y en ado- seguimiento de la patología.
lescentes sexualmente activos. Los abusado-
res de drogas intravenosas tienen riesgo de
ser colonizados por Gram negativos. En pacien- IMÁGENES DIAGNÓSTICAS
tes con artritis séptica crónica las micobacterias
y los hongos son las causas mas frecuentes. Las radiografías simples usualmente son nor-
males. Los cambios son sutiles y pueden in-
cluir aumento del espacio articular, que sugiere
PRESENTACIÓN mayor presencia de líquido intraarticular que
puede generar subluxación, luxación, necrosis
La artritis séptica es más común en niños que isquémica del cartílago articular, inflamación
en niñas y ocurre más frecuentemente en ni- de los tejidos blandos y después de 14 días
ños menores de dos años. El paciente puede destrucción ósea. Las radiografías simples
tener una historia reciente de infección del ayudan a descartar patologías frecuentes co-
tracto respiratorio superior o una infección lo- mo fracturas o tumores.
cal de tejidos blandos. Los pacientes con artri-
tis séptica generalmente parecen más enfer- El papel de la ecografía es controvertido; sin
mos que los que tienen osteomielitis, y presen- embargo, es más sensible que la radiografía
tan fiebre entre 38°C y 40°C. Los signos físicos en determinar la presencia de líquido articular,
incluyen eritema, limitación funcional, dolor a aunque no proporciona datos confiables en
la palpación, efusión intraarticular. La movili- cuanto a las características del líquido sinovial.
dad pasiva distiende la cápsula y genera ma-
yor dolor. En orden de frecuencia, la rodilla, la La gamagrafía ósea es menos efectiva en la
cadera, el tobillo y el codo son las articulacio- artritis séptica que en la osteomielitis. El
nes usualmente comprometidas. trazador evidencia una captación focal y me-
nor que en el caso de osteomielitis, especial-
mente en el neonato, en quien la respuesta
EXÁMENES DE LABORATORIO inflamatoria es limitada. La gamagrafía es útil
en áreas donde la localización es difícil, y pue-
El recuento leucocitario se encuentra elevado de mostrar múltiples sitios de infección en
en 30-60% de los pacientes, con desviación neonatos.

1158
CAPÍTULO XIX: ARTRITIS SÉPTICA

La tomografía axial computadorizada y la re- TRATAMIENTO


sonancia magnética nuclear no diferencian la
artritis séptica de la artritis no infecciosa. Pro- El tratamiento de la artritis séptica no debe
porcionan información acerca de la localiza- comenzar antes de que se hayan tomado las
ción topográfica exacta de la lesión y la pre- muestras pertinentes para cultivo porque los
sencia de osteomielitis concomitante. antibióticos disminuyen la posibilidad de obte-
ner gérmenes en los hemocultivos y aspiracio-
nes. Es necesario el lavado y aspiración de la
ASPIRACIÓN articulación para remover los microorganis-
mos, las enzimas bacterianas y las partículas
El examen de elección para confirmar el diag- y detritos libres en la articulación. El desbri-
nóstico es la aspiración de la articulación con damiento abierto se requiere en pacientes con
aguja, procedimiento que no debe ser diferido compromiso articular de la cadera, excepto en
si existe sospecha clínica de artritis séptica. los pacientes con artritis gonocóccica, porque
Si no se obtiene líquido durante una punción en estos casos la aspiración es suficiente.
de la articulación como la cadera, se debe
ordenar una artrografía para verificar la posi- El uso de la artroscopia es controvertido; sin
ción de la aguja dentro de la articulación. Tam- embargo, el lavado y desbridamiento articular
bién existe el recurso de hacer la punción con se puede realizar adecuadamente por vía
ayuda ecográfica. artroscópica.

Todo líquido aspirado debe enviarse al labo- El tratamiento con agentes antimicrobianos
ratorio para análisis, el cual debe incluir colo- intravenosos debe iniciarse tan pronto como
ración de Gram, cultivo, recuento de leucocitos las muestras para hemocultivos, el análisis del
con conteo diferencial, glucosa con determi- fluido sinovial y los cultivos sean informados.
nación de glucosa sérica, y la prueba del coá- Los resultados del Gram son la mejor guía pa-
gulo de mucina. El aspirado de articulaciones ra la toma de decisiones. Si el Gram no iden-
infectadas es positivo en 54-68% de los casos. tifica gérmenes, el antibiótico debe ser esco-
La tinción de Gram demuestra gérmenes has- gido con base en la edad del paciente, la inmu-
ta en 30-40% de los pacientes. Si la infección nocompetencia, la articulación comprometida
está presente, el líquido usualmente es tur- y la epidemiología local.
bio, el recuento celular de glóbulos blancos
es mayor de 50.000/mm3 con 90% de polimor- El tratamiento empírico inicial deber incluir un
fonucleares; adicionalmente la relación de glu- antibiótico que cubra el estafilococo, como
cosa sinovial/glucosa sérica es menor de 0,5 oxacilina o una cefalosporina de primera gene-
y la prueba para el coágulo de mucina es po- ración. Estos medicamentes también cubren
sitiva. Esta prueba demuestra la integridad del neumococo y estreptococo beta-hemolítico del
ácido hialurónico del fluído articular y es rea- grupo B. Debe darse cubrimiento contra micro-
lizada colocando una gota de ácido acético organismos Gram negativos, especialmente
en el fluído mientras se extiende la muestra en recién nacidos y en adolescentes para ase-
sobre el portaobjetos. Si la bacteria está pre- gurar protección contra el gonococo. En pa-
sente, el ácido hialurónico se degrada y la con- cientes inmunocomprometidos o en niños en
sistencia del líquido semeja la de leche corta- los cuales se aíslan microorganismos infre-
da. Una prueba positiva de mucina puede ver- cuentes puede usarse oxacilina y ceftriaxona.
se también en la fiebre reumática. La antibioticoterapia se mantiene por tres a

1159
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cuatro semanas. La gran mayoría de los pa- cal prediction algorithm. Am J Bone Joint Surg
cientes responden adecuadamente al trata- 1999; 81:1662-1670.
miento. 3. Lundy DW, Kehl DK. Increasing prevalence of
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children. J Pediatr Orthop 1998; 18:262-267.
Los factores que afectan el resultado son la 4. Lyon RM, Evanich JD. Culture- negative septic
demora en instaurar el tratamiento apropiado, artrhitis in children. J Pediatr Orthop 1999;19:655-
pacientes menores de seis meses, prematu- 659.
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dence of joint involvement with adjacent osteomye-
litis in pediatric patients. J Pediatr Orthop 2000;
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1. El-Gabalawy HS, Duray P, Goldbach-Mansky R. 28:168-178.
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vitis of the hip in children: An evidence-based clini- 2002; 73:427-431.

1160
CAPÍTULO XX: FIEBRE

CAPÍTULO XX

Fiebre

Antonio Carlos Jaramillo, MD, MSc


Director Instituto de Virología y Enfermedades Infecciosas
Universidad El Bosque
Bogotá

L a fiebre corresponde a un aumento de la


temperatura corporal, medido en forma ob-
jetiva, que sobrepasa los 37,8°C en la cavi-
sión del sistema nervioso central (tumores,
hemorragias) y rara vez en la insolación o
shock por exposición solar”, cuando no se
dad oral y los 38°C en el recto. La temperatu- habla de fiebre sino de hipertermia. La fiebre
ra corporal varía normalmente en el transcur- y la hipertermia son condiciones fisiológica-
so del día, siendo más baja en la mañana y mente diferentes. En la última, la producción
más elevada en la tarde. Esta variación pue- de calor excede a la pérdida del mismo como
de ser hasta de 1°C. se observa en la “hipertermia maligna”.

La fiebre generalmente se acompaña de un


aumento en la frecuencia del pulso, a razón PATOGENIA
de 15 pulsaciones por cada grado centígrado;
pero en algunos casos, o se presenta bradi- La fiebre se produce por alteraciones de la
cardia o no hay aumento consecuente, lo cual termorregulación en el hipotálamo, donde
se conoce como “disociación esfigmotérmica”. existe un centro o pequeña agrupación de
neuronas termosensibles cerca del piso del
La fiebre puede ser aguda o crónica, continua, tercer ventrículo. Pirógenos exógenos pueden
remitente, ambulante, periódica o difásica. A estimular el centro de la termorregulación.
cada uno de estos patrones se asocia un tipo Estos incluyen virus, productos bacterianos,
de patología. Por esta razón es importante es- endotoxinas, complejos inmunes y linfoquinas
tablecer en el análisis de la fiebre no solo sus liberadas a partir de linfocitos sensibilizados.
valores, tanto matutinos como vespertinos, los
que se ven influidos por el ejercicio (actividad
muscular), el metabolismo (comidas, reposo, ETIOLOGÍA
ciclos circadianos) sino que también es impor-
tante definir su tendencia y patrón. Para esto En el síndrome febril agudo las causas más
se requiere hacer mediciones seriadas a in- frecuentes son infecciosas; en el crónico las
tervalos regulares, registradas en la historia infecciones son también la primera etiología,
(“hoja de temperatura”) y por un periodo de seguida por neoplasias, enfermedades del
tiempo definido. colágeno y enfermedades granulomatosas

Ordinariamente la temperatura corporal no Además, muchos agentes infecciosos de tipo


supera los 40-41°C, excepto cuando hay le- bacteriano, protozoos y virus pueden causar

1161
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

fiebres hemorrágicas. Al comienzo de estos les incluyen a las causadas por varias familias
síndromes, los signos y síntomas (fase prodró- de virus RNA y DNA. A los agentes que causan
mica) son prácticamente indistinguibles. estas enfermedades se les agrupó primero co-
mo Arbovirus (fiebre amarilla, dengue, Bunya-
Las Fiebres Hemorrágicas Virales, incluyen a virus), en el “complejo Tacaribe” y, posterior-
las causadas por varias familias de virus RNA mente, la mayoría se incluyó dentro de las fa-
y DNA. milias Flaviviridae, Bunyamviridae, Arenaviri-
dae y Filoviridae.
Entre las más temidas actualmente, están una
serie de sídromes hemorrágicos que resulta- Las fiebres de origen desconocido (FUO) in-
ron ser producidos por virus y recibieron distin- cluyendo sus diversas y probables causas, se
tos nombres. Las Fiebres Hemorrágicas Vira- agrupan en el Cuadro No. 1.

CUADRO No. 1: CAUSAS MÁS FRECUENTES DE FIEBRE DE ORIGEN DESCONOCIDO (FOU, “FIEBRE PROLONGADA”).

Infecciones (40%)
Tuberculosis
Endocarditis infecciosa subaguda
Infección urinaria (ITU)
Infecciones por citomegalovirus (CMV)
Absceso hepático

Neoplasias (20%)
Hipernefroma
Tumor pancreático
Cáncer pulmonar
Leucemia

Enfermedades del tejido conectivo (15%)


Artritis reumatoidea
Lupus Eritematoso
Poliarteritis nudosa
Polimiositis

Causas menos comunes (20%)


Enfermedad granulomatosa
Enteropatias inflamatorias (enteritis regional)
Tromboembolismo pulmonar
Hipertiroidismo

Idiopáticas (7 –13 %)

1162
CAPÍTULO XX: FIEBRE

Algunas son conocidas desde hace muchos FIEBRE RECURRENTE


años como la fiebre amarilla o el dengue he-
morrágico que han resurgido al reemerger sus Se caracteriza por periodos de fiebre alterna-
vectores y la viruela, erradicada del mundo dos con periodos afebriles. Durante los epi-
pero que podría reaparecer por efectos del bio- sodios febriles la fiebre pude presentarse en
terrorismo; otras, de reciente aparición por di- una de las formas antes descritas.
ferentes razones biológicas, sociales, políticas
y hasta económicas (como la neumonía atípi- DISOCIACION ESFIGMOTÉRMICA
ca o SARS de comienzos del 2003) se han
extendido por varios países y continentes. Se presenta con elevación de la temperatura
sin aumento en la frecuencia cardíaca. Pue-
de observarse en brucelosis, fiebre tifoidea,
PATRONES DE FIEBRE psitacosis, dengue y fiebre amarilla.
Un patrón febril no debe ser considerado como
patognomónico del cuadro causado por un DIAGNÓSTICO
agente infeccioso, pero puede convertirse en
una valiosa pista para el estudio etiológico. El diagnóstico de un síndrome febril debe em-
Estos patrones incluyen: pezar por definir si se trata de un caso agudo,
es decir con menos de tres semanas de evo-
FIEBRE INTERMITENTE lución, o crónico (fiebre de origen desconoci-
do (FUO), fiebre prolongada).
Se caracteriza por amplia oscilación en las
cifras de temperatura. El uso generalizado de
Para definir si la posible causa es infecciosa
antipiréticos es una de las causas más comu-
se deben tomar muestras pertinentes para
nes de este patrón intermitente. También se
confirmar la etiología antes de iniciar trata-
observa en tuberculosis diseminada, en pielo-
miento especifíco.
nefritis aguda con bacteremia y muy frecuen-
temente en la malaria (paludismo).
En algunos casos puede ser importante esta-
blecer si se trata de “fiebre ficticia” y el méto-
FIEBRE CONTINUA
do más simple para confirmarla es medir la
Es aquella que se presenta con elevaciones temperatura de una muestra fresca de orina,
moderadas pero persistentes en la temperatu- lejos del paciente.
ra corporal, con mínimas fluctuaciones. Orien-
ta a pensar en brucelosis, fiebre tifoidea y neu- EXÁMENES DE LABORATORIO Y PRUEBAS
monía neumocóccica. DIAGNÓSTICAS

FIEBRE REMITENTE Los exámenes mínimos que deben practicarse


a un paciente con síndrome fébril son: hemo-
Es similar a la intermitente excepto porque las leucograma completo con sedimentación, he-
fluctuaciones son menos dramáticas sin que moparásitos, citoquímico de orina, bacilosco-
retorne la temperatura a cifras normales. Se pia, coproscopia, examen de líquido cefalorra-
ve en las infecciones virales respiratorias, quideo, hemocultivos, aspirado de médula
neumonía por micoplasma y malaria por Plas- osea, mielocultivos.
modium falciparum.

1163
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Cuando se sospecha etiología infecciosa, se síntomas importantes, a modificar resultados


deben ordenar pruebas para la detección del de laboratorio que de otra manera servirían
antígeno microbiano: exámenes directos, mi- de diagnóstico y en otros casos a complicar
croscopía electrónica, cultivos, inmunoensa- el cuadro inicial con sobreinfección bacteriana
yos para antígeno; los anticuerpos que se pro- o micótica oportunista, como puede ocurrir en
ducen contra ellos: ensayo biológico, inmuno- las enfermedades virales. Por esta razón, sal-
ensayo; o ácidos nucléicos por pruebas de bio- vo en aquellos casos en los cuales sea eviden-
logía molecular diagnóstica: NAT, hibridiza- te la etiología o esté seriamente amenazada
ción, PCR, NASB, etc. la vida del paciente, no se recomienda utilizar
antibióticos ni combinaciones de los mismos.
En algunos casos son necesarias además
imágenes diagnósticas como radiografía de El único caso en que está indicado el uso de
tórax, de abdomen, TAC, resonancia magné- antibióticos en forma empírica, es en las llama-
tica y ecografía. das “urgencias infectológicas”. En estos casos
el tratamiento se debe hacer por no más de 48-
72 horas y debe cubrir más de 90% de los pató-
COMPLICACIONES genos probablemente causantes del problema.

La principal y más importante complicación de ANTIPIRÉTICOS


la fiebre es la aparición de convulsiones y, en
la hiperpirexia, el desequilibrio electrolítico; Acido acetil salicílico (ASA) y derivados
pero, en general, el aumento no exagerado Son los más frecuentemente utilizados para
de la temperatura corporal no reviste mayor disminuir la temperatura. Su administración
gravedad y más bien puede tener un efecto dependerá de la enfermedad de base.
potenciador de la respuesta inmune, tanto la
mediada por anticuerpos como la mediada por Contraindicaciones: hipersensibilidad cono-
células. cida al ASA u otros salicilatos; trastornos de
coagulación asociados con trombocitopenia y
alteraciones plaquetarias; úlcera gástrica o
MANEJO DE LA FIEBRE duodenal; embarazo y lactancia.

El manejo de la fiebre, mientras se define su Precauciones: no se recomienda su uso en


etiología, es esencialmente sintomático y de pacientes con enfermedades alérgicas o res-
soporte. Ese manejo inicial, debe incluir la apli- piratorias broncoconstrictivas crónicas (obs-
cación de medios físicos como aplicación de tructivas), asma, fiebre del heno o hipereacti-
esponjas con agua fría, bolsas con hielo en vidad bronquial.
abdomen y regiones inguinal y axilar y el baño
general con agua tibia. Interacciones: intensifican la acción de anti-
coagulantes y el riesgo de hemorragias gastro-
Es universal la tentación de los jóvenes cole- intestinales durante el tratamiento concomitan-
gas de iniciar empleo de antibióticos de am- te con corticosteroides; los efectos de los
plio espectro, sin haber tomado las muestras AINES, de las sulfonilureas, metotrexato, las
de laboratorio para establecer la etiología, concentraciones en el plasma de digoxina,
como si los antibióticos fueran antipiréticos. barbituratos, litio, sulfonamidas y sus combi-
Ello sólo contribuye a enmascarar signos y naciones y del ácido valproico.

1164
CAPÍTULO XX: FIEBRE

Reducen los efectos de antagonistas de aldos- Contraindicaciones: hipersensibilidad al di-


terona y diuréticos de asa, antihipertensivos clofenaco, úlcera péptica, asma, urticaria o
y uricosúricos. rinitis aguda, hipersensibilidad al ácido acetil-
salicílico y otros AINES, trastornos renales. No
La dosis usual es de 500-1000 mg cada 3-4 se recomienda su uso en el embarazo y la
horas (en artritis y fiebre reumática se puede lactancia.
usar el doble de dosis).
Interacciones: puede aumentar la toxicidad
Acetaminofen del litio y la digoxina y los efectos de los
Está indicado especialmente en pacientes hipoglucemiantes y anticoagulantes.
alérgicos al ácido acetilsalicílico, que estén
anticoagulados o que presenten trastornos Los AINES están contraindicados en pacientes
gástricos. que hayan padecido ataques de asma, urtica-
ria o rinitis aguda tras la administración de áci-
Contraindicaciones: hipersensibilidad al ace- do acetilsalicílico u otros medicamentos que
taminofen. Se debe usar con precaución en inhiben la actividad de la prostaglandina-
pacientes con insuficiencia hepática o renal. sintetasa.

Efectos adversos: erupciones cutáneas, urti- Efectos adversos: irritación gastrointestinal,


caria, hepatotoxicidad, trastornos renales y de- náuseas, diarrea, ocasionalmente hemorragia,
presión medular, lo mismo que algunas reac- anemia aplásica, granulocitosis.
ciones contradictorias con cloranfenicol, war-
farina sódica y zidovudina. La presentación mas usada del diclofenaco
es en tabletas de 50 mg. La dosis usual: 100-
La dosis usual es 250 mg cada 4 horas, o 500 150 mg al día, en 2 ó 3 tomas, vía oral, prefe-
mg cada 8 horas por vía oral para adultos (hay riblemente después de las comidas.
tabletas de 250 y 500 mg).
Por vía parenteral, se usa una ampolla (3 ml
Para niños se recomienda la administración con 75 mg de diclofenaco sódico) inyectable
en jarabe, cada 4–6 horas, que viene en pre- diaria IM; en casos severos 2 ampollas dia-
sentación de 150 mg/5 mL y se dosifica así: rias, una cada 12 horas.

Niños de 1 a 3 años: 75 – 150 mg (1/2 a 1


cucharadita: 2.5 a 5 mL).
De 3 a 6 años: 150 – 225 mg (1 a 11/2 cucha- LECTURAS RECOMENDADAS
raditas: 5 a 7.5 mL).
De 6 a 12 años: 300 – 450 mg (2 a 3 cucha- 1. Andreozzi J, Stamboulian D. Las leyes fundamen-
tales del uso de antibióticos. En: Temas de Infec-
raditas: 10 a 15 mL).
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2. Bayard V, Ortega E. Hantavirus pulmonary
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El más recomendado es el diclofenaco por su 3. Casasbuenas J, Síndrome febril. En: Manual de
actividad inhibitoria de las prostaglandinas y Urgencias de Medicina Interna. Asociación Colom-
porque es más fácil utilizarlo por vía parenteral biana de Medicina Interna. Ediciones Acta Médi-
u oral cada seis a ocho horas. ca Colombiana. Bogotá, 1994.

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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

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JAMA 1977; 268:21-83.

1166
CAPÍTULO XXI: SALMONELLOSIS

CAPÍTULO XXI

Salmonellosis

Jaime Saravia Gómez, MD


Profesor Honorario
Facultad de Medicina, Universidad Nacional de Colombia.
Profesor Emérito, Facultad de Medicina Universidad Nacional de Colombia.
Jefe de la Sección de Infectología,
Fundación Hospital San Carlos

DEFINICIÓN

L as Salmonellosis constituyen un grupo de


infecciones producidas por bacterias del
género Salmonella, adquiridas por la ingestión
Recientemente se ha propuesto una clasifica-
ción más simple, en 2 especies: Salmonella
bongori y Salmonella enterica, ésta última a
de alimentos o bebidas contaminados; se ca- su vez dividida en varios subgrupos o subes-
racterizan por estado febril asociado a mani- pecies (I, II, III, etc.), cada uno de ellos con
festaciones gastrointestinales, diarrea y dolo- numerosas serotipos. La S. enterica subgrupo
res abdominales, moderados o severos. I, reúne todas las salmonellas aisladas de se-
res humanos y animales de sangre caliente,
incluida la Salmonella typhi. Los otros subgru-
ETIOLOGÍA pos reúnen los serotipos de animales de san-
gre fría o del medio ambiente.
El género Salmonella está constituido por nu-
merosas especies cuya clasificación y taxono- Los gérmenes anteriormente designados co-
mía ha sido objeto de varias modificaciones y mo S. arizona, ahora pertenecen a la S. enteri-
cambios. Hasta hace pocos años la más utili- ca subgrupo III. La S. bongori parece ser la
zada fue la basada en la serotipificación de predecesora de la S. entérica pero le faltan
Kauffmann y White, que tenía en cuenta los en el genoma los SPI. Mientras se dispone de
antígenos flagelares H y los antígenos O (poli- una clasificación definitiva y estable nos aco-
sacáridos de los lipopolisacáridos) e incluía geremos a la de Kauffmman-White.
mas de 2.440 serotipos.
En general, los diferentes síndromes han sido
asociados a determinados serotipos así:

1167
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Serotipo: Serogrupo: Síndrome


Salmonella paratiphi A Fiebre entérica
Salmonella paratyphi B Fiebre entérica
Salmonella tiphymurium B Gastroenteritis
Salmonella paratyphi C1 Fiebre entérica
Salmonella cholerasuis C2 Bacteremia
Salmonella newport C Gastroenteritis
Salmonella typhi D Fiebre entérica
Salmonella enteritidis D Gastroenteritis
Salmonella dublin D Bacteremia
Salmonella arizona (no grupable) Gastroenteritis

En nuestro medio las S. typhi y paratyphi con- ser adquirida por el contacto directo con ani-
tinúan siendo las más frecuentemente identi- males. Algunos serotipos específicos han es-
ficadas. tado ligados a ciertos alimentos o exposicio-
nes. Un ejemplo lo constituyen los brotes de
infección por Salmonella serotipo Enteritidis,
EPIDEMIOLOGÍA que han estado asociados a la ingestión de
huevos crudos, mal cocinados.
Las salmonellosis constituyen una causa im-
portante de enfermedad diarreica en los se- Las infecciones por salmonella continúan sien-
res humanos. La Salmonella typhi y la S. para- do una causa importante de enfermedad, es-
typhi colonizan únicamente a los humanos, lo pecialmente en niños.
cual hace necesaria para la transmisión la pre-
sencia de casos humanos o de portadores cró- FACTORES PREDISPONENTES
nicos. Las salmonellosis no-typhi se presen- A LAS INFECCIONES POR SALMONELLA
tan básicamente como resultado de la inges-
tión de alimentos de origen animal contami- I. Gastrointestinales
nados con estos microorganismos. a. Aclorhidria
b. Uso previo de antibióticos
La fiebre tifoidea se observa con mayor fre- c. Medicamentos que disminuyen la
cuencia en los países en desarrollo, donde hay motilidad
rápido crecimiento de la población, aumento
de la urbanización, manejo inapropiado de de- II. Sistémicos
sechos y fuentes de agua potable inadecua- a. SIDA.
das. La disminución de los casos o la erradi- b. Linfomas.
cación de la infección están directamente re- c. Anemias hemolíticas (sobrecarga de
lacionadas con el saneamiento ambiental y hierro).
con el adecuado tratamiento del agua. d. Lupus eritematoso sistémico.
e. Uso de corticoides.
Como las salmonellas se encuentran en di- f. Trasplante de órganos.
versos hospederos animales, incluidos los in- g. Deficiencias congénitas de interferón y
sectos, reptiles, anfibios, pájaros y mamífe- de interleuquina 12 ó sus receptores.
ros, la infección es una zoonosis que puede h. Schistozomiasis.

1168
CAPÍTULO XXI: SALMONELLOSIS

FISIOPATOLOGÍA La capacidad de la Salmonella para sobrevi-


vir dentro de los macrófagos probablemente
La fiebre tifoidea, producida por la Salmonella es esencial en la patogenia de la fiebre tifoi-
typhi, es una infección exclusiva del hombre. dea y en la diseminación de los gérmenes a
Al no ser posible reproducirla en ninguna otra la circulación sistémica a través del conducto
especie animal, son difíciles los estudios expe- torácico. Finalmente los gérmenes son cap-
rimentales sobre su patogenia y los datos co- tados por los macrófagos tisulares en la me-
nocidos corresponden a estudios realizados dula ósea, el bazo y las placas de Peyer.
en voluntarios humanos.
Los mecanismos por los cuales las salmone-
Las salmonellas son bacterias invasoras que llas no-tiphy producen la gastroentritis perma-
penetran por la vía oral, deben superar varias necen oscuros a pesar de los extensos estu-
barreras o líneas de defensa naturales para dios sobre la patogenia de las infecciones por
finalmente localizarse en el ileon terminal y el salmonella.
colon proximal. La primera barrera es la acidez
gástrica; sin embargo, las salmonellas tienen
capacidad de adaptarse a ésta y pueden so- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
brevivir a pH de 4,0. Además, deben evitar
la lisis por las sales biliares, desplazarse a lo Se pueden agrupar en cuatro grandes síndro-
largo del intestino, competir con la flora endó- mes clínicos:
gena e invadir las células epiteliales intesti-
nales. Son más susceptibles los individuos con 1. Gastroenteritis.
aclorhidria y quienes ingieren antiácidos. 2. Bacteremia.
3. Fiebres entéricas.
Después de pasar el estómago las salmone- 4. Infecciones localizadas.
llas llegan al intestino delgado donde interac-
túan con las células de la pared intestinal. Los GASTROENTERITIS
péptidos catiónicos antibacterianos, secreta-
dos por las células de Paneth del intestino del- Es la más común de las infecciones por salmo-
gado podrían representar una importante se- nella. Clínicamente es indistinguible de las
gunda línea de defensa contra salmonella y gastroenteritis producidas por otros patógenos
otros patógenos. gastrointestinales. Casi todos los serotipos de
salmonella del grupo 1 pueden producir la gas-
Un pequeño porcentaje de pacientes desarro- troenteritis. Los más frecuentemente aislados
lla colitis, la cual es indistinguible clínica y ra- son S. typhimurium, S. enteritidis y S. newport.
diológicamente de la colitis ulcerativa, pero pa- Aproximadamente 48 horas después de la in-
tológicamente distinta. Si las defensas del gestión del alimento o el agua contaminados,
huésped no controlan la infección, la salmone- se inicia un cuadro de dolor abdominal, acom-
lla se disemina a los ganglios linfáticos me- pañado de vómito y diarrea que pueden variar
sentéricos y luego al hígado y bazo. en intensidad y volumen, usualmente en canti-
dad moderada y acompañada de sangre o mo-
Para evadir con éxito todas estas barreras, co y de tenesmo rectal. En la mayoría de los
las salmonellas han desarrollado mecanismos casos hay fiebre entre 38° y 39°C. Pueden
específicos. aparecer otros síntomas generales como cefa-
lea y mialgias. En individuos inmunocompe-

1169
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

tentes, la gastroenteritis usualmente se autoli- por la aparición de fiebre progresiva y es-


mita al cabo de 4-8 días. Ocasionalmente re- calonada asociada a cefalea intensa, ano-
quiere rehidratación parenteral y hospitaliza- rexia y astenia.
ción. • El segundo período corresponde a la 2 a y
3a semanas. Los síntomas se acentúan y
Los pacientes con otras condiciones patoló- la fiebre se estabiliza y es continua. La ce-
gicas concomitantes, como inmunosupresión falea permanente no cede a los analgési-
por SIDA, enfermedad inflamatoria del intes- cos convencionales, el estado de concien-
tino, cáncer, trasplantes o desnutrición pue- cia se altera y el paciente entra en un esta-
den desarrollar cuadros severos de gastroen- do de sopor (tiphus). Con frecuencia se ob-
teritis acompañados de bacteriemia. También servan signos meníngeos, presenta diarrea
el cuadro es más severo en los niños y los intensa y aparecen signos de deshidrata-
ancianos. ción. En la piel del tronco en 30% puede
observarse lesiones maculo papulosa de
Después de la resolución de la gastroenteritis color salmón, conocidas como manchas ro-
el promedio de duración como portador de la sadas. Este rash puede ser difícil de ob-
Salmonella no-typhi en las heces es de 4-5 servar especialmente en los individuos de
semanas. Esto sin embargo, depende de las piel oscura. El examen del abdomen mues-
especies. En los neonatos se ha observado tra dolor a la palpación, distensión y peris-
la tendencia a ser portadores por tiempos pro- taltismo aumentado. En 50% de los casos
longados, hasta 6 meses. se puede observar hepatoesplenomegalia.
• El tercer período es el estadio de declina-
FIEBRES ENTÉRICAS – FIEBRE TIFOIDEA ción en el cual la fiebre empieza a disminuir
en forma progresiva. Sin antibióticos la en-
Dentro de las fiebres entéricas, la fiebre tifoidea fermedad se resuelve en aproximadamen-
es la más conocida y la más severa. Es produ- te cuatro semanas, pero persisten debili-
cida por la Salmonella typhi. Síndromes menos dad intensa, astenia y pérdida de peso que
severos conocidos como fiebre paratifoidea, son pueden prolongarse por varias semanas.
producidos por las S. paratyphi A y C. Con el tratamiento antibiótico apropiado, la
fiebre se resuelve en 3-5 días. La severi-
La fiebre tifoidea es una enfermedad grave, dad depende del estado inmunológico, de
caracterizada por cuadro clínico de fiebre, pos- la duración de la enfermedad antes de es-
tración, cefalea y manifestaciones gastrointes- tablecerse el diagnóstico, de la edad o de
tinales que incluyen dolor abdominal difuso y la asociación con otras enfermedades.
estreñimiento o diarrea.
La infección no tratada oportunamente puede
Tiene un período de incubación de 21 días tener complicaciones severas como son la he-
(10 en promedio) y sus manifestaciones clíni- morragia masiva y la perforación intestinal. La
cas en los pacientes no tratados específica- antibioticoterapia oportuna ha cambiado en
mente es clásico dividirlas en semanas o sep- forma significativa la evolución y el pronósti-
tenarios, que de acuerdo a su evolución pue- co de la fiebre tifoidea.
den describirse así:
Las fiebres paratifoideas presentan un síndro-
• Un primer período o período inicial de apro- me parecido pero de menor severidad.
ximadamente una semana, caracterizado

1170
CAPÍTULO XXI: SALMONELLOSIS

BACTEREMIA E INFECCIÓN VASCULAR que quienes no tienen la infección. Se calcula


que el riesgo en los portadores del VIH aumen-
La mayoría de los serotipos de Salmonella del ta entre 20 y 100 veces, con más posibilidades
subgrupo I pueden producir bacteremias pri- que en las personas normales de causar in-
marias (hemocultivos positivos en ausencia de fección invasora muy grave, como diarrea ful-
diarrea) e infecciones extraintestinales. Sólo minante, enterocolitis aguda, ulceración rec-
unas pocas se consideran altamente invaso- tal, bacteremia recurrente e incluso la muerte
ras; dentro de ellas están la S. choleraesuis y a pesar de la terapia. Por razones no conoci-
la S. dublin. Muy próximas están todas las S. das, el SIDA no aumenta el riesgo de infec-
typhimurium y S. enteritidis. ción por Salmonella typhi. Los CDC (Atlanta)
incluyeron la salmonellosis recurrente dentro
Mientras la S. choleraesuis puede producir de los criterios diagnósticos del SIDA. Sin em-
bacteremias en huéspedes previamente sa- bargo, las salmonellosis no-typhi ha disminui-
nos, las otras salmonellas requieren o están do en los últimos años debido al uso de la
asociadas a estados de inmunosupresión o zidovudina en el tratamiento antiretroviral y al
anemias hemolíticas. de sulfametoxazol-trimetoprim en la preven-
ción de la neumonía por el P. carinii. La zidovu-
Es importante saber si la bacteremia es sos- dina a concentraciones terapéuticas tiene ac-
tenida y de alto grado (más de 50% de hemo- tividad contra la salmonella.
cultivos positivos), porque estas bacteremias
sugieren infección vascular. La salmonella pa-
rece tener especial afinidad por los tejidos en- PORTADORES CRÓNICOS
doteliales y la infección de la aorta asociada
a fístula aorto-duodenal es una condición bien Son aquellos individuos en quienes después
conocida. La infección por salmonella de los de la enfermedad clínica, persiste por meses
grandes vasos lleva a la formación de aneu- e inclusive por años la eliminación de salmo-
rismas micóticos. nellas en las heces. Epidemiológicamente son
de particular importancia en la transmisión de
FORMAS LOCALIZADAS la enfermedad. Solo un pequeño porcentaje
(0,2-0,6%) de los pacientes con salmonella no-
La anemia de células falciformes es la causa tífica pasa a portadores crónicos, mientras que
más frecuentemente asociada a la osteomie- de los infectados con S. typhi aproximadamen-
litis por salmonella. te 1-4% serán portadores crónicos. El diag-
nóstico se hace por coprocultivos seriados o
La endocarditis es muy rara en la fiebre tifoi- por cultivo de bilis obtenida del duodeno. La
dea y sólo se describe en 0,3% de todas las condición de portador crónico ocurre mas fre-
salmonellosis. cuentemente en mujeres y en personas que
tienen alteraciones de las vías biliares, espe-
Las meningitis por Salmonella se presentan cialmente presencia de cálculos.
en niños menores de un año.

SALMONELLOSIS Y SIDA MÉTODOS DE DIAGNÓSTICO


Los pacientes con SIDA tienen incidencia de Dadas las diversas manifestaciones clínicas,
bacteremia por salmonellas no-typhi mayor la confirmación del diagnóstico requiere

1171
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

métodos microbiológicos que permitan el ais- DIAGNÓSTICO SEROLÓGICO


lamiento e identificación del microorganismo,
así como pruebas serológicas que permitan Reacción de seroaglutinación (Widal): es
la tipificación de los mismos o el reconocimien- de poco valor como prueba diagnóstica. En la
to de anticuerpos específicos en el suero de infección no tratada sólo cerca de 50% de los
los pacientes. pacientes pueden tener un aumento signifi-
cativo de las aglutininas contra el antígeno “O”.
Hemocultivo: se utilizan medios selectivos. Las aglutininas H no tienen valor diagnóstico
Son el procedimiento de elección para el diag- aunque puedan observarse títulos elevados
nóstico de la fiebre tifoidea, de la bacteremias de ellas.
y de algunas formas extraintestinales. En la
fiebre tifoidea son especialmente útiles duran- Otros
te la primera semana. En estudios epidemiológicos se utilizan las
pruebas de fagotipificación de susceptibilidad
Mielocultivo: el cultivo del aspirado de mé- contra los antimicrobianos y el perfil plasmí-
dula ósea se considera como el mejor méto- dico, las cuales han demostrado ser útiles y
do para el aislamiento de Salmonella en fie- complementarias para el estudio de cepas ais-
bre tifoidea y paratifoidea. Aunque el procedi- ladas de alimentos o de aguas contaminadas
miento produce molestia transitoria, en gene- y en brotes de salmonellosis en las cuales se
ral es bien tolerado y los cultivos son rápida- requiere establecer una fuente común de in-
mente positivos. Debe ser practicado por per- fección.
sonal con experiencia.

Coprocultivo: es el método indicado para el TRATAMIENTO


diagnóstico de la gastroenteritis. En la fiebre
tifoidea puede ser positivo desde el comienzo En la terapéutica de la fiebre tifoidea, de fie-
de la infección aunque su máxima positividad, bres entéricas y las salmonellosis no tíficas,
en pacientes no tratados se observa hacia la se deben considerar los siguientes aspectos:
3° semana. Es particularmente útil para el
control post-tratamiento de los pacientes y 1. Tratamiento sintomático o medidas de so-
para detectar los portadores crónicos. porte.
2. Tratamiento específico con antimicro-
Cultivo de bilis duodenal: obtenida por as- bianos.
piración o utilizando un dispositivo en cápsu- 3. Tratamiento de las complicaciones.
las de gelatina “string test”. No es superior al 4. Tratamiento de los portadores crónicos.
hemocultivo y con certeza no supera la aso- 5. Tratamiento de los pacientes con SIDA.
ciación del hemocultivo con el coprocultivo.
TRATAMIENTO SINTOMÁTICO O MEDIDAS
Urocultivo: su valor diagnóstico es muy DE SOPORTE
limitado.
En pacientes o huéspedes normales la gastro-
La salmonella también puede ser aislada de enteritis, que en la mayoría de los casos es
otros productos como las manchas rosadas, una condición autolimitada, no requiere admi-
la secreción bronquial, el líquido articular, etc. nistración de antibióticos pero sí de líquidos y
electrolitos. El promedio de duración de la

1172
CAPÍTULO XXI: SALMONELLOSIS

diarrea es de 7,2-8,8 días y no se modifica bién se recomienda tratar a los pacientes


por la terapéutica. mayores de 65 años debido a la alta mortali-
dad en estas personas.
TRATAMIENTO ANTIMICROBIANO
TRATAMIENTO DE LAS COMPLICACIONES
Las quinolonas o fluoroquinolonas constituyen
en la actualidad la medicación de primera elec- Recaídas: en la fiebre tifoidea se recomienda
ción en el tratamiento de la fiebre tifoidea, ad- seguir un esquema similar al del episodio agu-
ministradas por vía oral o por vía parenteral IV. do y la colecistectomía como medida comple-
han demostrado ser muy activas contra la ma- mentaria.
yoría de las Salmonellas, incluída la S.typhi.
Enterorragia: se puede observar en 3-10%
Ciprofloxacina. 500 mg 2 veces al día, oral o de los pacientes; según el volumen perdido,
IV, durante 10 días, puede ser una buena al- se trata con transfusión de glóbulos rojos y
ternativa. Debe, sin embargo, tenerse en con- líquidos parenterales.
sideración, la aparición de algunas cepas re-
sistentes a este grupo de antibióticos. Perforación: es la más grave de las compli-
caciones; usualmente aparece alrededor de
El sulfametoxazol-trimetoprim puede ser uti- la tercera o cuarta semanas, se puede obser-
lizado para el tratamiento de la fiebres var en 3% de los casos. Requiere administra-
entérica; sin embargo, sus resultados son va- ción de otros antibióticos como los aminoglu-
riables. Dosis: 5 mg/kg/día, cada 6 horas, por cósidos, las cefalosporinas antipseudomonas,
10-14 días. el metronidazol y medidas interdisciplinarias
para el control del choque séptico.
Las cefalosporinas de 3a generación, en
particular la ceftriaxona, se consideran tam- Abscesos: cuando aparecen es necesario
bién buena alternativa para el tratamiento de drenarlos quirúrgicamente.
la fiebre tifoidea en dosis de 2g/día IV, por 10-
14 días. El tratamiento de las formas extraintestinales
focales frecuentemente requiere tratamiento
El cloramfenicol, anteriormente considerado quirúrgico y antibióticos. Las infecciones extra-
como el tratamiento de elección, actualmente intestinales mas frecuentes son las infeccio-
sólo se considera como una alternativa para nes endoteliales y la meningitis.
el tratamiento de cepas sensibles; tiene bue-
na difusión tisular y bajo costo. El inconve- Los aneurismas micóticos, la mayoría de las
niente del cloramfenicol es su toxicidad hema- veces se localizan en la aorta infrarrenal, pero
tológica, caracterizada por depresión medular pueden observarse también en la aorta torá-
relacionada con la dosis. Más rara y de mayor cica o en otras de las grandes arterias.
gravedad es la pancitopenia o aplasia medular
idiosincrásica. Los aneurismas micóticos deben ser reseca-
dos; de otra forma la bacteriemia recurrirá y
Los pacientes con gastroenteritis que están el aneurisma puede romperse. La terapéutica
en alto riesgo de complicaciones o tienen dia- médica sola tiene mortalidad elevada, pero
rrea sanguinolenta y fiebre deben ser trata- puede ser la única alternativa cuando está
dos con una fluoroquinolona por 5 días. Tam- comprometido el arco aórtico.

1173
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las meningitis se trataban con cloramfenicol Vacunación: se recomienda para viajeros que
hasta que aparecieron las cefalosporinas de van a regiones donde la fiebre tifoidea es en-
tercera generación, como la ceftriaxona. Aun- démica. Hay dos tipos de vacunas, una oral y
que no se dispone de estudios controlados, otra para administración parenteral, que de-
estas cefalosporinas tienen CIM (Concentra- ben ser administradas entre 1-2 semanas an-
ción Inhibitoria Mínima) muy bajas que permi- tes del viaje. La vacuna oral requiere refuerzo
ten niveles adecuados en el LCR. El tiempo cada 5 años y la parenteral cada 2 años. Las
de tratamiento recomendado es de 4-6 sema- vacunas existentes se usan para la preven-
nas, salvo cuando son producidas por bacte- ción de la fiebre tifoidea pero no para la de
rias resistentes. otras salmonelosis.

TRATAMIENTO DE LOS PORTADORES


ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
Se utilizan varios antibióticos, entre ellos las
quinolonas, la ampicilina, el sulfametoxaxol- El objetivo debe ser mantener al paciente en
trimetoprim. Adicionalmente es necesario reposo con hidratación y equilibrio hidroelec-
practicar la colecistectomía. trolítico adecuados, lo cual puede hacerse por
vía oral. No debe administrarse aspirina por
TRATAMIENTO DE LOS PACIENTES el riesgo de producir hipotermia profunda o
CON SIDA hipotensión. Para el control de la fiebre se
aconseja utilizar el acetaminofén.
Los pacientes con SIDA, que presenten un
primer episodio de bacteriemia deberán reci- El uso de antidiarreicos debe hacerse con cau-
bir tratamiento parenteral IV durante una o dos tela, pues la falta de motilidad intestinal pue-
semanas y luego continuarlo por vía oral con de llevar a perforación intestinal.
una quinolona, como ciprofloxacina, para erra-
dicar la salmonella y disminuir el riesgo de Se debe evitar la administración de laxantes
bacteremia recurrente. y enemas.

Las quinolonas y la zidovudina tienen efecto


sinergístico contra la Salmonella. La asocia- CRITERIOS DE REFERENCIA
ción de los dos medicamentos podría reducir
en forma significativa la infección recurrente El paciente con formas no complicadas de sal-
por este microorganismo. monellosis, puede ser tratado en forma ambu-
latoria, controlando las manifestaciones dia-
rreicas y evitando la deshidratación.
PREVENCIÓN
Cuando en las gastroenteritis aparezcan
Las medidas básicas para protección contra signos de compromiso sistémico o deshidra-
las salmonellosis, incluídas la fiebre tifoidea y tación avanzada, el paciente se debe enviar
la gastroenteritis, son evitar el consumo de a un servicio de urgencias con el objetivo de
alimentos o bebidas con riesgo de estar con- mantener hidratación y equilibrio electroliticos
taminados y en el caso particular de la tifoi- adecuados, evitar otras complicaciones y
dea, la vacunación a quienes viajan a regio- realizar exámenes de laboratorio complemen-
nes endémicas. tarios.

1174
CAPÍTULO XXI: SALMONELLOSIS

Cuando en el curso de la fiebre tifoidea apa- serotype Thyphimurium DT.104. N Eng J Med
rezcan signos de shock o de compromiso se- 1999; 34:1420-25.
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1175
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XXII

Infección de la vía urinaria inferior

Nancy Yomayusa, MD
Coordinadora de Nefrología
Jefe del Departamento de Investigación Básica
Clínica Reina Sofía

Hernando Altahona, MD
Director Científico, Clínica Reina Sofía
Bogotá

EPIDEMIOLOGÍA

A los servicios de urgencias acuden fre-


cuentemente personas con sintomatolo-
gía de infección aguda de las vías urinarias,
asocia estrechamente con alteraciones estruc-
turales del tracto urinario, circunstancia que
siempre debe evaluarse.
cuyo manejo debe ser ordenado, expedito y
eficiente.
FISIOPATOLOGÍA
Las infecciones agudas de las vías urinarias
(IVU) constituyen una causa importante de La invasión del tracto urinario está determina-
morbilidad en el adulto. En Norte América son da por las características de la bacteria, el ta-
responsables de aproximadamente siete millo- maño del inóculo y las alteraciones en los me-
nes de consultas y cien mil hospitalizaciones. canismos de defensa del huésped. La mayo-
En Colombia no se dispone de estadísticas ría de los microorganismos ingresan por la ure-
pertinentes. La cistitis es particularmente fre- tra, desde donde ascienden a la vejiga. El ori-
cuente en el sexo femenino, con una inciden- gen de estas bacterias es la flora fecal y los
cia de 0,5-0,7% por año. Se considera que la reservorios vaginales. Una vez sucede la co-
mitad de las mujeres pueden presentar al me- lonización del meato uretral, el ingreso se fa-
nos un episodio de IVU en algún momento de cilita por factores mecánicos, como obstruc-
su vida y que una de cuatro mujeres puede ción del flujo urinario, trauma, reflujo vesico-
recidivar, circunstancia que implica mayor ries- ureteral, disfunción vesical neurogénica, rela-
go de resistencia a los antibióticos de uso ciones sexuales o la presencia de sonda vesi-
frecuente. cal. Otros factores relevantes son acidez de
la orina, hiperosmolaridad renal y diabetes
La prevalencia de bacteriuria en el hombre mellitus. El acto sexual predispone a la colo-
adulto es muy baja, menos de 0,1%, con un nización de la uretra y la vejiga, y se requiere
incremento importante a medida que ascien- la integridad de los mecanismos de defensa
de la edad, relacionándose principalmente con del huésped para erradicar los microorga-
prostatitis. La bacteriuria en los hombres se nismos.

1176
CAPÍTULO XXII: INFECCIÓN DE LA VÍA URINARIA INFERIOR

FACTORES DE DEFENSA DEL HUÉSPED La magnitud de la respuesta humoral sérica y


urinaria es mayor en la pielonefritis que en la
Existen factores protectores en el huésped cistitis, dado el menor compromiso de las célu-
que incluyen desde los sencillos mecanismos las inmunoreactivas en este último proceso.
de flujo urinario, micción y vaciamiento vesical,
que contrarrestan la capacidad de adhesión
bacteriana, hasta los complejos sistemas de DEFINICIONES
respuesta inmunitaria, tanto celular como hu-
moral. Cualquier tipo de obstrucción, desde Bacteriuria significativa. El estándar diag-
el meato hasta los túbulos renales, se consti- nóstico clásico para la IVU es la presencia de
tuye en factor predisponente para la infección bacteriruria significativa, definida como el ais-
de las vías urinarias, pues inhibe el flujo normal lamiento de 100.000 unidades formadoras de
de la orina y deteriora los mecanismos norma- colonias por mililitro (105 UFC/mL) de un único
les de defensa del uroepitelio; además, favore- patógeno en una muestra de orina espontá-
ce la capacidad adhesiva de las bacterias por nea. Este es un límite válido para bacteriuria
la ausencia del fenómeno de “lavado”. Las asintomática y pielonefritis, así como para
principales alteraciones que generan obstruc- estudios epidemiológicos en grupos de pobla-
ción son: valvas, bandas, estenosis, cálculos, ción sana. Actualmente se consideran recuen-
obstrucción vesical, compresión extrínseca de tos más bajos como bacteriuria significativa
los uréteres por neoplasias, fibrosis o embara- en las siguientes condiciones:
zo y vejiga neurogénica. Otras obstrucciones
intrarrenales como nefrocalcinosis, nefropatía • En las mujeres con manifestaciones clíni-
por ácido úrico, hipokalemia crónica, riñones cas floridas de cistitis se considera el aisla-
poliquísticos y nefropatía por analgésicos re- miento de 100 UFC/mL (102 UFC/mL) en
sultan en incremento de la frecuencia de una muestra de orina espontánea tomada
pielonefritis. de la mitad de la micción.
• En varones sintomáticos se considera bac-
La orina tiene la capacidad de reducir la super- teriuria significativa la presencia de 10 3
vivencia bacteriana, por una de combinación UFC/mL.
de factores como el pH, la osmolaridad, la con- • Infección asociada con sonda vesical: 10 2
centración de urea y de ácidos orgánicos. El UFC/mL, en pacientes sintomáticos.
crecimiento bacteriano es inhibido por una ori-
na diluida y, por el contrario, la elevación de Infección de vías urinarias no complicada.
la osmolaridad (800 mOsm) reduce la fago- Proceso infeccioso que ocurre en pacientes
citosis por los polimorfonuclerares. sin alteraciones anatómicas o funcionales del
tracto urinario.

RESPUESTA INMUNITARIA A LA INFECCIÓN Infección de vías urinarias complicada. Pro-


ceso infeccioso que ocurre en pacientes con
Existe una respuesta inmunitaria inespecífica, alteraciones anatómicas o funcionales del
humoral tanto sistémica como local, así como tracto urinario que incluyen:
una respuesta de tipo celular ante la coloni-
zación e invasión bacteriana, pero hasta el • Litiasis.
momento no se ha podido dilucidar su fun- • Vejiga neurogénica.
ción en cuanto a la prevención de la IVU. • Enfermedad poliquística del riñón.

1177
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Diabetes. Existe una gran diferencia entre la flora bacte-


• Inmunosupresión. riana en un paciente con un primer episodio
• Embarazo. de IVU en comparación con la flora de pacien-
• Instrumentación reciente de la vía urinaria. tes con episodios recurrentes. E. coli es el mi-
croorganismo más frecuente en episodios de
infección aguda; por el contrario, en infeccio-
FACTORES DE RIESGO nes recurrentes, especialmente en pacientes
con alteraciones estructurales del tracto urina-
Los factores de riesgo de IVU son determina- rio como uropatia obstructiva, anomalías con-
dos principalmente por la edad y el género: génitas, vejiga neurogénica y fístulas, hay pre-
ponderancia de Klebsiella spp, Proteus
• Género: las mujeres son 30 veces más sus- spp, Pseudomona spp, Enterobacter spp, así
ceptibles que los varones a desarrollar IVU. como de flora mixta. En este grupo de pacien-
tes también es frecuente el antecedente de
• Edad: instrumentación de la vía urinaria y de múlti-
- En el grupo de mujeres en edad fértil ples cursos de antibioticoterapia, lo cual pre-
tienen más riesgo las que usan diafrag- dispone a la selección de microorganismos
ma y espermicida. multiresistentes. En nuestro medio la presen-
- En el grupo de mujeres menopáusicas, cia de síndrome miccional con piuria y urocul-
hasta 20% padecen IVU por la altera- tivos repetidamente negativos obliga a des-
ción de la flora endógena. cartar tuberculosis.
- Los hombres jóvenes rara vez tienen
IVU. La IVU en este grupo se asocia con
homosexualidad, falta de circuncisión y PRESENTACIÓN CLÍNICA
exposición a parejas con colonización
anormal de la flora vaginal. Tradicionalmente se ha considerado la cistitis
- Los hombres mayores de 50 años pa- como una patología caracterizada por la pre-
decen mayor número de infecciones por sencia de disuria, polaquiuria, micción urgente
patologías prostáticas. (síndrome miccional), acompañada a menudo
de dolor suprapúbico, orina maloliente y en
• Otros: ocasiones hematuria.
Catéter vesical: El solo hecho de colocar
una sonda vesical conlleva un riesgo de Dada la elevada frecuencia de consultas por
5% de infección, y por cada día de perma- IVU a los servicios de urgencia y consulta ex-
nencia de la sonda hay un riesgo estimado terna, es necesario contar con una herramien-
de 5%. ta certera de diagnóstico clínico. Bent y cola-
boradores realizaron una revisión sistemática
de la literatura entre los años 1996 y 2001,
ETIOLOGÍA seleccionando artículos que evaluavan la
exactitud de la historia clínica y del examen
La cistitis no complicada es causada en 90% físico en el diagnóstico de la IVU; cuatro sín-
de los casos por E. coli, en 5-10% por S. sapro- tomas y un signo incrementan significativa-
phyticus y con menor frecuencia por otras mente la probabilidad de IVU como se mues-
enterobacterias tales como Klebsiella spp, tra en la Tabla 1, siendo las características
Proteus spp. más importantes:

1178
CAPÍTULO XXII: INFECCIÓN DE LA VÍA URINARIA INFERIOR

• Disuria. • Anomalía anatómica o funcional de la vía


• Polaquiuria. urinaria.
• Hematuria. • Infección por Proteus spp.
• Dolor lumbar.
• Dolor a la palpación en el ángulo costover- DIAGNÓSTICO
tebral.
La sospecha de infección de orina se susten-
A su vez, cuatro síntomas y un signo disminu- ta en el cuadro clínico y el análisis de la orina,
yen la probabilidad de IVU: y se confirma mediante el estudio del sedi-
mento urinario y, si está indicado, el urocultivo.
• Ausencia de disuria. Sedimento urinario. Se requiere una muestra
• Ausencia de dolor lumbar. de orina espontánea tomada de la mitad de la
• Historia de flujo e irritación vaginal. micción previo aseo genital, la cual debe ser
• Evidencia al examen genital de flujo procesada sin demora. En el uroanálisis de-
vaginal. ben evaluarse las siguientes características:
En resumen, las mujeres con uno o más sín- • Piuria: detección de más de 10 leucocitos
tomas tienen una probabilidad de IVU de 50%. por mm3 de orina no centrifugada o más
La combinación de síntomas, por ejemplo, la de 5 leucocitos por campo en orina centrifu-
presencia de disuria, polaquiuria, ausencia de gada y examinada con microscopio de 40
flujo o irritación aumentan la probabilidad de aumentos. En los pacientes con cistitis este
IVU a 90%. hallazgo tiene una sensibilidad superior a
95%. La presencia de piuria también se
El médico debe permanecer atento a los ca- puede determinar mediante la prueba de
sos de IVU subclínica, los cuales suelen ser estearasa leucocitaria con tira colorimétrica
frecuentes en varones y en las mujeres con (dipstick) la cual es equivalente a detectar
cualquiera de las siguientes situaciones: 10 leucocitos/mL.
• Prueba de nitritos con tira colorimétrica: la
• Embarazo. prueba tiene una especificidad mayor de
• Infección previa en el último mes. 90%, pero una sensibilidad de apenas 50%,
• Inmunosupresión. que puede ser inferior si la concentración
• Diabetes. de microorganismos es menor de 10≥ UFC/
• Insuficiencia renal. ml o el tiempo de permanencia de la orina
en la vejiga es inferior a 4 horas.

TABLA 1. SÍNTOMAS Y SIGNOS QUE AUMENTAN LA PROBABILIDAD DE IVU.

SÍNTOMAS Y SIGNOS LR IC 95%


Disuria 1,5 1,2-2,0
Polaquiuria 1,8 1,1-3,0
Hematuria 2,0 1,3-2,9
Dolor lumbar 1,6 1,2-2,1
Dolor a la palpación ángulo costovertebral 1,7 1,1-2,5
LR: Likelihood ratio
IC: Intervalo de confianza

1179
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Urocultivo. Tradicionalmente se considera En el varón joven y en el de mediana edad la


positivo el hallazgo en el urocultivo de más cistitis en ausencia de patología urológica o
de 100.000 unidades formadoras de colonias manipulación de la vía urinaria debe sugerir
por mililitro. Según las características del el diagnóstico de prostatitis, especialmente si
paciente se deben seguir los lineamientos la infección urinaria es recurrente.
previstos en el apartado de bacteriuria signifi-
cativa.
TRATAMIENTO
No está indicado realizar urocultivo en las mu-
jeres con cistitis no complicada, ni antes ni No existe una recomendación única y la selec-
después del tratamiento. ción del esquema de tratamiento depende de
los patrones de susceptibilidad microbiana
El urocultivo está indicado solamente en pa- prevalentes en cada área, la farmacocinética
cientes con las siguientes condiciones: del antibiótico, el espectro de actividad antimi-
crobiana, los efectos adversos y la duración
• Cistitis en pacientes del sexo masculino. de la terapia.
• Infección de vías urinarias complicada.
• Recidivas precoces, es decir durante el En 1999 la IDSA (Infectious Diseases Society
primer mes. of America) desarrolló una guía de práctica
clínica basada en la evidencia para el manejo
Radiología. Los exámenes funcionales y mor- de cistitis no complicada y pielonefritis en
fológicos están indicados en los siguientes mujeres, la cual fue avalada por la Asociación
casos: Urológica Americana y la Sociedad Europea
de Microbiología Clínica y Enfermedades
• En pacientes de sexo masculino con infec- Infecciosas.
ción de vías urinarias.
• En mujeres con infección urinaria recidi- Estas guías establecen esquemas de trata-
vante. miento sustentados en la evaluación de tres
• En pacientes con sospecha de patología parámetros fundamentales:
urológica concomitante.
1. Erradicación de la bacteriuria.
2. Eliminación de la posibilidad de recurrencia
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL de bacteriuria.
3. Aparición de efectos adversos de medica-
En las mujeres jóvenes se debe hacer con las mentos.
siguientes condiciones clínicas:
La adaptación de las anteriores recomenda-
• Infecciones vaginales: las cuales cursan ciones a nuestro medio debe sustentarse en
con flujo vaginal y sensación de irritación los estudios de sensibilidad. Como en Colom-
sin disuria. Su etiología más frecuente es bia no existen estadísticas nacionales que indi-
Gardnerella, Candida albicans, Trichomo- quen la prevalencia de la resistencia de la E.
nas sp. coli a trimetropim-sulfametoxazol (TMS), tal
• Enfermedad pélvica inflamatoria cuyos sín- vez el más usado antibiótico en el tratamiento
tomas pueden mimetizar una IVU. de la IVU, se recomienda basarse en las
estadísticas de cada institución.

1180
CAPÍTULO XXII: INFECCIÓN DE LA VÍA URINARIA INFERIOR

Se ha informado que aproximadamente 33% prevalencia de resistencia entre cepas de E.


de las cepas bacterianas aisladas en cistitis coli uropatógena sea superior a 20%, debe
muestran resistencia in vitro a amoxacilina y considerarse el manejo con quinolonas, nitro-
TMS; 1-2% son resistentes a nitrofurantoina furantoina o fosfomicina. La amoxacilina y
y 1-2% a quinolonas. En la última década se otros betalactámicos están indicados en la IVU
ha incrementado en forma significativa la resis- no complicada, en embarazadas y en pacien-
tencia de la E. coli a TMS en mujeres con cisti- tes infectados por gérmenes Gram positivos
tis aguda no complicada, principalmente en como el estreptococo del grupo B.
pacientes con factores de riesgo tales como
diabetes, hospitalización reciente, tratamiento En la Tabla 3 se ilustra la terapia según la con-
frecuente y por largos periodos con TMS. Los dición clínica y bacteriológica.
pacientes con IVU complicada tratados con
TMS incrementan hasta cinco veces el riesgo En cuanto a la duración de la terapia en la
de resistencia. La tasa de falla clínica en pa- cistitis aguda, se deben considerar los siguien-
cientes con cistitis por E. coli manejados con tes aspectos:
TMS es de 3-13% entre cepas susceptibles y
de 27-40% entre cepas resistentes. Este pa- • La terapia de una sola dosis es menos efec-
norama de resistencia al TMS tiene implicacio- tiva en erradicar la bacteriuria comparada
nes en su uso empírico, por lo cual se reco- con terapia de tres o siete días.
mienda como terapia de elección solamente • A diferencia de la terapia de una sola dosis,
en el primer episodio de cistitis aguda; sin em- el curso de tres días es equivalente en efi-
bargo, en las instituciones o áreas donde la cacia a tratamientos de 7 ó más días.

TABLA 2. SÍNTOMAS Y SIGNOS QUE DISMINUYEN LA PROBABILIDAD DE IVU.

SÍNTOMAS Y SIGNOS LR IC 95%


Ausencia de disuria 0,5 0,3-0,7
Ausencia de dolor lumbar 0,8 0,7-0,9
Historia de flujo vaginal 0,3 0,1-0,9
Historia de irritación vaginal 0,2 0,1-0,9
Evidencia al examen de flujo vaginal 0,7 0,5-0,9
LR: Likelihood ratio
IC: Intervalo de confianza

TABLA 3. TRATAMIENTO DE CISTITIS AGUDA NO COMPLICADA.

RESISTENCIA TRATAMIENTO Y DOSIS


Resistencia a TMS <20% TMS 160-800 c/12h x 3 días.
Resistencia a TMS >20% Fluoroquinolonas por 3 días.
Norfloxacina 400mg c/12 horas.
Ciprofloxacina 500 mg c/12 horas.
Ofloxacina 200 mg c/12 horas.
Levofloxacina 250-500mg cada día.
Nitrofurantoína 50-100 mg cada 6 horas por siete días.
Fosfomicina trometamol 3gr dosis única.

1181
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Las terapias prolongadas están asociadas Recidivas. Se considera recidiva todo episo-
con incremento en los efectos adversos y dio de IVU que ocurre en las primeras sema-
mayor costo, sin aumento en la eficacia con nas luego de la aparente curación de la infec-
respecto a tratamientos de tres días. ción urinaria, y causado por la persistencia del
• La terapia de tres días se recomienda para mismo microorganismo. Las recidivas se de-
pacientes con cistitis no complicada. No se ben a terapia inadecuada, ya sea por esque-
recomienda en caso de IVU complicadas mas cortos o por antibióticos inadecuados; a
ni en mujeres posmenopáusicas. la existencia de alteraciones estructurales del
tracto genitourinario; a focos persistentes no
La terapia antibiótica en cursos de 7 a 10 días detectados como prostatitis o absceso renal;
se recomienda en: y a la presencia de cálculos en la vía urinaria.

• La mujer embarazada. El tratamiento sigue la pauta de la cistitis bac-


• Pacientes con diabetes, insuficiencia renal, teriana, orientando la terapia según los repor-
inmunodepresión. tes del antibiograma, siempre en cursos de 4
• Infección previa en el último mes. a 6 semanas. En el hombre se recomienda el
• Infección por Proteus spp, anomalía ana- uso de fluoroquinolonas, que son los fármacos
tómica o funcional de la vía urinaria. con mejor penetración al tejido prostático. En
• En el anciano. los casos de recidiva luego de un tratamiento
de seis semanas, particularmente en mujeres
La cistitis aislada en el varón es poco frecuen- embarazadas o en pacientes con uropatía
te, aunque se presenta en homosexuales, en obstructiva de alto riesgo, se recomienda pro-
varones no circuncidados y después de son- filaxis durante 6-12 meses con dosis bajas de
daje vesical. Se aconseja realizar un estudio antibióticos. (Tabla 5)
urológico (ecografía, urografía intravenosa)
para descartar una anomalía subyacente (litia- Reinfecciones. Las reinfecciones hacen re-
sis, hipertrofia prostática, etc.). Si el estudio ferencia a infecciones de vías urinarias causa-
urológico es negativo, debe sospecharse das por una cepa distinta. Es frecuente en mu-
prostatitis. jeres en edad fértil con vida sexual activa, en
quienes se puede presentar un episodio de
En el varón no existen estudios que hayan reinfección luego de un primer episodio de cis-
evaluado la eficacia de pautas cortas (3 días) titis. Por lo general no existe antecedente o
y se aconseja tratar la cistitis durante 7-14 evidencia de alteraciones estructurales de la
días. Dada la escasa penetración prostática vía urinaria, en cuyo caso no es indispensa-
de la mayoría de los antibacterianos se da pre- ble el estudio radiológico.
ferencia a las fluoroquinolonas. Se debe rea-
lizar urocultivo postratamiento para identificar En los casos de reinfecciones poco frecuen-
las recidivas. tes, de menos de tres episodios al año, se rea-
liza tratamiento individualizado en cada opor-
tunidad y se recomienda alta ingesta de líqui-
INFECCIONES RECURRENTES dos y realizar una micción postcoital. En los
casos en los cuales se presentan más de tres
Las infecciones urinarias recurrentes se pue- episodios de IVU al año se recomienda seguir
den clasificar como recidivas y reinfecciones. el protocolo de profilaxis antibiótica durante
6-12 meses, con urocultivos de control men-

1182
CAPÍTULO XXII: INFECCIÓN DE LA VÍA URINARIA INFERIOR

suales (Tabla 5). Si los episodios están aso- INFECCIONES DE VÍAS URINARIAS
ciados con la relación sexual, se recomienda
profilaxis post coital (Tabla 6). DURANTE EL EMBARAZO

En las mujeres postmenopáusicas las reinfec- La IVU es la infección más frecuente durante
ciones se asocian con alteraciones del tracto el embarazo y se asocia con un elevado ries-
genitourinario por vejiga neurogénica, inconti- go de pielonefritis, parto prematuro y mortali-
nencia urinaria, prolapso genitourinario y nive- dad fetal. Por su parte la bacteriuria asinto-
les bajos de estrógenos que condiciona dismi- mática es un factor de riesgo importante de
nución en la concentración vaginal de Lacto- pielonefritis y de recién nacidos con bajo peso,
bacíllus spp y, como consecuencia, aumento por lo cual se recomienda tamizaje de diagnós-
del pH vaginal con colonización por bacilos tico en la semana 12-16. Las pacientes con
Gram negativos. En tales casos se recomien- diagnóstico de bacteriruria asintomática deben
da profilaxis antibiótica, cuya duración depen- recibir manejo antibiótico. La probabilidad de
de del tipo de anomalía en el tracto urinario; desarrollar pielonefritis disminuye de 30% en
como alternativa, en ausencia de alteraciones pacientes no tratadas a 1-2% en pacientes tra-
anatómicas o funcionales, se recomiendan tadas de manera adecuada.
cremas vaginales con estrógenos.

TABLA 4. PROFILAXIS EN INFECCIÓN DE VÍAS URINARIAS RECURRENTES.

ANTIBIÓTICO DOSIS
TMP-SMX 80 mg TMP/400 mg SMX día ó 3 veces semana
Nitrofurantoina 50 mg día
Norfloxacina 200 mg/día tres veces por semana

TABLA 5. PROFILAXIS ANTIBIÓTICA POST COITO.

ANTIBIÓTICO DOSIS
TMP-SMX 80 mg TMP/400 mg SMX
NitrofurantoÍna 50 mg
Cefalexina 250 mg
Norfloxacina 200 mg

TABLA 6. TRATAMIENTO DE IVU EN MUJERES EMBARAZADAS.

ANTIBIÓTICO DOSIS
Nitrofurantoína 50 -100 mg cada 6 horas por 7 días
Amoxacilina-ácido clavulínico 500 mg cada 12 horas por tres días
Cefalexina 500 mg cada 6 horas por 3 a 7 días
Amoxacilina 500 mg cada 8 horas por 7 días

1183
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS 10. McCarty JM, Richard G, Huck W, et al. A rando-


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1184
CAPÍTULO I: CEFALEA

CAPÍTULO I

Cefalea

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales de FEPAFEM
Bogotá

INTRODUCCIÓN

L os pacientes que acuden al servicio de ur-


gencias por cefalea representan el 3% del
total de consultas en un año y el 15% tienen
Estas estructuras son inervadas por ramas
aferentes de los pares craneales V, VII, IX, X
y por las raíces nerviosas de los tres primeros
una condición seria como causa de cefalea. nervios cervicales. Se presenta dolor cuando
La actitud inicial del médico debe ser la de iden- hay tracción, inflamación o distensión, de for-
tificar los pacientes con una patología grave. ma especial, de la duramadre, los vasos san-
guíneos y los nervios.
La cefalea puede constituir un trastorno prima-
rio o ser un síntoma secundario de infección El tipo y localización del dolor son datos es-
aguda, hipertensión arterial severa, tumor ce- pecíficos que ayudan a establecer el diagnós-
rebral o de muchas afecciones oculares, na- tico. La causa de la mayor parte de las cefa-
sales, faríngeas, dentales y vertebrales. leas es extracraneal más que intracraneal.

Casi la mitad (±40%) de la población padece


una cefalea intensa e incapacitante una vez CUADRO CLÍNICO
al año.
CLASIFICACIÓN

Una forma útil de clasificar a los pacientes que


FISIOPATOLOGÍA consultan por cefalea es la siguiente:

Las estructuras sensibles al dolor en la cabe- • Cefalea con alteraciones en la escala de


za incluyen: coma de Glasgow o con signos neuroló-
gicos focales.
• Duramadre. • Cefalea con papiledema sin signos neuro-
• Arterias. lógicos focales.
• Senos venosos. • Cefalea con fiebre, sin signos neurológicos
• Ojos. focales.
• Membranas timpánicas. • Cefalea con signos extracraneales.
• Columna vertebral espinal. • Cefalea sin otros signos.

1187
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CEFALEA CON ALTERACIONES je a zonas endémicas de malaria, caso en el


EN LA ESCALA DE COMA DE GLASGOW cual el examen de gota gruesa aclara el diag-
O CON SIGNOS NEUROLÓGICOS FOCALES nóstico.

En el examen físico se encuentran como La mayoría de los pacientes que se presentan


hallazgos: en esta categoría requiere imágenes diagnós-
ticas del sistema nervioso central. El examen
• Valor en la escala de coma de Glasgow <14. inicial más útil es la tomografía axial computa-
• Presencia de signos de focalización. dorizada (TAC).
• Anormalidades pupilares.
• Irritación meníngea. Una vez estabilizado el individuo, el tratamien-
to definitivo será consultado con el especia-
Aunque el diagnóstico no se conozca con lista apropiado.
exactitud, el paciente debe recibir oxígeno su-
plementario. La presión arterial y la glucemia
deben ser controladas en forma apropiada. CEFALEA CON PAPILEDEMA SIN SIGNOS
Las enfermedades que se presentan bajo esta NEUROLÓGICOS FOCALES
categoría son:
Las principales causas de estos hallazgos son
Vasculares: las siguientes:
• Enfermedad cerebro vascular.
• Hemorragia subaracnoidea. • Arteriales: hipertensión.
• Hematoma subdural. • Intracraneales: neoplasias, edema cere-
bral, pseudotumor cerebri.
Infecciosas: • Venosas: trombosis de senos venosos.
• Meningitis.
• Encefalitis viral. En los casos asociados a hipertesión arterial,
• Absceso cerebral. se hace diagnóstico de emergencia hiperten-
• Empiema subdural. siva y se inicia el manejo conveniente.
• Malaria cerebral.
Si la presión arterial se encuentra dentro de lími-
Neoplásicas: tes normales, está indicado practicar una TAC.
• Tumor cerebral primario.
• Tumor cerebral metastásico. A pesar de que en la evaluación inicial no haya
signos focales, durante la progresión de la en-
La forma de inicio de los síntomas permite ha- fermedad pueden aparecer. Así, la hiperten-
cer el diagnóstico diferencial. sión arterial sostenida puede dar origen a en-
fermedad cerebrovascular.
• Inicio agudo: causas vasculares.
• Inicio subagudo: causas infecciosas.
• Inicio crónico: neoplasias. CEFALEA CON FIEBRE,
SIN SIGNOS NEUROLÓGICOS FOCALES
Si el paciente tiene fiebre, es pertinente reali-
zar hemocultivos e iniciar terapia antibiótica Es una forma frecuente de presentación de
apropiada. Puede existir el antecedente de via- muchas enfermedades. Una característica útil

1188
CAPÍTULO I: CEFALEA

para diferenciar las múltiples causas es la pre- • Cefalea por más de 15 días durante no
sencia de rigidez nucal. menos de seis meses;
• dolor bilateral que no se incrementa con el
Las enfermedades de esta categoría son: ejercicio y no se asocia con vómito;
• Intracraneanas: meningitis, hemorragia su- • más frecuente en mujeres:
baracnoidea y encefalitis. • en 40% de las personas con cefalea tensio-
• Extracraneanas: focales: sinusitis aguda. nal hay una historia familiar de cefalea;
• Sistémicas: virosis, malaria y fiebre tifoidea. • es precipitada por estrés o ansiedad.

Cuando se encuentran signos de irritación me- En la consulta, el paciente aparece ansioso,


níngea, está indicado realizar una punción con taquicardia, fotofobia y contracción mus-
lumbar para descartar meningitis, encefalitis cular cervical exagerada. Inicia en la mañana
o hemorragia subaracnoidea. y empeora a medida que avanza el día.

El tratamiento incluye tranquilizar al paciente,


CEFALEA CON SIGNOS EXTRACRANEALES dar analgésicos para controlar el dolor y dar
apoyo en cuanto a los problemas emocionales
Diferentes condiciones se presentan con ce- que produjeron la enfermedad. El uso de medi-
falea y signos extracraneanos. Los más fre- camentos es controvertido. Una revisión no sis-
cuentes son: temática de estudios observacionales concluyó
que el uso de medicamentos analgésicos pue-
• Sinusitis aguda. de favorecer el desarrollo de cefalea crónica.
• Glaucoma agudo.
• Arteritis de células gigantes. Cefalea tipo migraña. Es una enfermedad co-
• Espondilosis cervical. mún que afecta a 10-25% de las mujeres y a
2-10% de los hombres. El riesgo es mayor de
El manejo de cada una de estas entidades se 50% en personas con familiares que padecen
revisa en otras guías de manejo de urgencias migraña. Se caracteriza por ataques recurren-
en esta misma serie. tes de cefalea que duran entre 4 y 72 horas.
Se clasifica en clásica, común y variante.

CEFALEA SIN OTROS SIGNOS Cualquiera sea la forma, los individuos afec-
tados siempre tienen síntomas prodrómicos y
En la mayoría de los pacientes que acuden al episodios agudos de dolor. Los síntomas pro-
servicio de urgencias por cefalea, no se en- drómicos ocurren en las 24 horas anteriores
cuentra ningún signo en el examen físico. al ataque.

Las causas son: Los episodios agudos de dolor pueden ser uni-
• Cefalea tensional. laterales o bilaterales. Son descritos como
• Cefalea tipo migraña. sensación de pulsación continua. Se asocian
• Cefalea en racimos. con náuseas y vómito. La mayoría de los
ataques se resuelven en 48 horas.
Cefalea tensional. Los criterios de la Interna-
tional Headache Society para la cefalea El manejo de un ataque de migraña incluye:
tensional son: • Reposo en un ambiente tranquilo y oscuro.

1189
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Analgesia con antiinflamatorios no esteroi- 6. Goadsby PJ, Ferrari MD, Olesen J, et al. Eletriptan
deos como ácido acetilsalicílico, naproxe- in acute migraine: a double-blind, placebo-contro-
no. También se puede utilizar acetamino- lled comparison to sumatriptan. Eletriptan Steering
Committee. Neurology 2000; 54:156-163.
fen y antieméticos como metroclopramida.
7. Holroyd KA, O’Donnell FJ, Stensland M, et al.
• Sumatriptan, si el manejo analgésico inicial Management of chronic tension-type headache with
no es útil. La dosis es de 6 mg en forma tricyclic antidepressant medication, stress mana-
subcutánea; 70% de los pacientes respon- gement therapy, and their combination: a randomi-
den a la medicación. Está contraindicado zed controlled trial. JAMA 2001; 285:2208-2215.
en pacientes con enfermedad coronaria o 8. Leone M, D’Amico D, Frediani F, et al. Verapamil
hipertensión arterial. in the prophylaxis of episodic cluster headache: a
double-blind study versus placebo. Neurology
Puede aparecer migraña complicada. Los sín- 2000; 54:1382-1385.
tomas neurológicos continúan después de ter- 9. Lipton RB, Baggish JS, Stewart WF, et al. Efficacy
and safety of acetaminophen in the treatment of
minar la cefalea. Las alteraciones más comu-
migraine: results of a randomized, double-blind,
nes son disartria, afasia y dislexia. Pueden ser placebo-controlled, population-based study. Arch
permanentes como resultado de pequeños Intern Med 2000; 160:3486-3492.
infartos por vasoconstricción. 10. Lipton RB, Stewart WF, Stone AM, et al. Stratified
care vs step care strategies for migraine: the
Disability in Strategies of Care (DISC) Study: A
LECTURAS RECOMENDADAS randomized trial. JAMA 2000; 284:2599-2605.
11. Mannix LK. Epidemiology and impact of primary
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ter headache. Neurology 2000; 54:1832-1839. 12. Richman PB, Allegra J, Eskin B, et al. A randomized
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clinical trial of intravenous magnesium sulfate as droperidol for the treatment of acute migraine
an adjunctive medication for emergency depart- headache. Am J Emerg Med 2002; 20:39-42.
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Med 2001; 38:621-627. lactic treatment of migraine with angiotensin con-
3. Dahlof C, Tfelt-Hansen P, Massiou H, et al. Dose verting enzyme inhibitor (lisinopril): randomised,
finding, placebo-controlled study of oral almotriptan placebo controlled, crossover study. BMJ 2001;
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Semin Neurol 2001; 21:371-376. Neurol 2001; 58:944-950.

1190
CAPÍTULO II: HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA

CAPÍTULO II

Hemorragia subaracnoidea

José Nel Carreño, MD


Exjefe de Urgencias,
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a hemorragia subaracnoidea (HSA) es una


de las mayores catástrofes intracraneanas
que puede sufrir un individuo. A pesar de su
temente de pérdida del conocimiento, vómito
y a veces convulsiones. Sin embargo, un por-
centaje importante de pacientes se presenta
altísima tasa de mortalidad (30-50%), de los con lo que ha sido llamado síntomas de hemo-
severos déficits neurológicos que produce en rragia centinela. En este caso se trata de un
los supervivientes (sólo el 40% vuelve a su pequeño sangrado aneurismático que prece-
estado pre-mórbido) y que más de 50% de de por horas o días a la hemorragia cataclís-
los afectados jamás logra revincularse a su mica y que se caracteriza también por ser sú-
actividad laboral, la epidemiología de esta en- bita, menos intensa y rara vez acompañada
fermedad no ha recibido la atención que me- de pérdida de la conciencia.
rece. Igualmente, el manejo suele ser erráti-
co, el diagnóstico inapropiado y el control pre, La cefalea puede presentarse después del
intra y post-operatorio muy deficiente. Con ejercicio, coito o en la ducha debido a que la
esta guía se pretende informar al médico de elevación súbita de la presión arterial pueden
urgencias de los signos y síntomas que alertan romper el domo del aneurisma. Un factor de
sobre la presencia de la enfermedad, los pro- confusión frecuente se da en los pacientes con
cedimientos diagnósticos adecuados y el ma- migraña crónica. Sin embargo, un buen
nejo oportuno en las primeras horas. interrogatorio de las características de la ce-
falea demostrará que su presentación es di-
ferente: la cefalea de la HSA no se precede
DIAGNÓSTICO de aura, no es hemicránea ni suele
acompañarse de fosgenos o convulsiones.
A pesar de los avances en métodos diagnós-
ticos, muchos de los pacientes no llegan a cen- El examen físico revela frecuentemente sig-
tros especializados sino hasta horas o aun nos meníngeos caracterizados por fotofobia,
días después de haber sufrido una HSA. Estas rigidez de nuca e hiperestesia ocular. Sin em-
demoras ensombrecen el pronóstico, debido bargo, cuando la hemorragia ha sido muy re-
a que es en los momentos iniciales cuando ciente es factible no encontrarlos, como tam-
se puede proteger el cerebro lesionado. El poco aparecen en pacientes en estado de
diagnóstico acertado depende inicialmente de coma. Los déficit focales no son frecuentes y
la detección de los síntomas más frecuentes: cuando aparecen pueden deberse a lesiones
los pacientes suelen referir cefalea súbita, in- isquémicas producidas por el vasoespasmo
tensa y holocraneana, acompañada frecuen- inmediato o por compresión aneurismática de

1191
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

estructuras nerviosas, como el tercer par cra- Clínicamente la HSA se gradúa de acuerdo
neano, que se comprime por aneurismas de con dos escalas muy utilizadas: la escala de
la arteria comunicante posterior (parálisis in- Hunt–Hess y la clasificación de la Federación
completa caracterizada por midriasis, sin Mundial de Cirugía Neurológica (WFNS). Ta-
oftalmoplejía). bla No.1.

TABLA 1. CLASIFICACIÓN DE LA HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA

Hunt – Hess
Grado Estado Neurológico
I Asintomático o con cefalea leve.
II Cefalea moderada, rigidez nucal o parálisis de oculomotores.
III Confusión, somnolencia o déficit neurológico leve.
IV Estupor o hemiparesia.
V Coma con rigidez de descerebración. Paciente moribundo.
WFNS
I No cefalea ni signos de focalización. Glasgow 15.
II Cefalea, rigidez nucal sin signos de focalización Glasgow 15.
III Cefalea, rigidez nucal sin signos de focalización Glasgow 13-14.
IV Cefalea, rigidez nucal con signos de focalización Glasgow 9-13.
V Cefalea, rigidez nucal con signos de focalización Glagow <8.

Una vez hecho el diagnóstico clínico se pro- tó de una punción traumática es probable que
cede a comprobarlo con tomografía axial los eritrocitos sean todos frescos y el conteo
computadorizada (TAC) que siempre debe disminuya tubo por tubo, debido a que el lí-
hacerse sin contraste. Lamentablemente, en quido se va aclarando. Si realmente se trata
los servicios de urgencia tiende a sobreutili- de una HSA el conteo se mantendrá estable y
zarse la tomografía contrastada. Si se sospe- los eritrocitos tenderán a ser crenados, espe-
cha sangrado agudo, el contraste dificulta la cialmente si la HSA ocurrió mas de doce ho-
visualización de la sangre pues adquiere la ras antes de la punción; además. el líquido
misma tonalidad. será xantocrómico.

Hasta 5% de las tomografías de buena calidad Una vez hecho el diagnóstico el siguiente paso
pueden ser falsamente negativas en presencia es definir la conducta, lo cual debe ser hecho
de HSA, especialmente en hemorragias re- por un neurocirujano. Se puede proceder a
cientes o centinelas. Si la sospecha clínica si- angiografía diagnóstica (y a veces terapéuti-
gue siendo alta a pesar de la tomografía, se ca, si hay disponibilidad de terapia endovas-
debe realizar una punción lumbar diagnóstica. cular y la anatomía del aneurisma es propicia
Esta debe hacerse con el menor trauma posi- para este tratamiento), a la cirugía de emer-
ble, a fin de no viciar el resultado. Se deben gencia (en caso de hidrocefalia aguda o he-
tomar varios tubos y cuantificar el número de matoma intraparenquimatoso) o a la obser-
eritrocitos en cada uno de los tubos. Si se tra- vación en cuidado intensivo.

1192
CAPÍTULO II: HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA

TRATAMIENTO DE URGENCIA bién es necesario tener en cuenta que puede


producirse edema pulmonar como consecuen-
En urgencias el tratamiento depende de las cia de la hipervolemia. Así que, en urgencias,
condiciones clínicas del paciente y debe se- se prefiere la reanimación normovolémica pa-
guir los mismos criterios de reanimación es- ra mantener una presión arterial media jamás
tablecidos para todo paciente crítico. inferior a 70 mmHg. Las metas de hipertensión
aceptadas son: presión arterial sistólica has-
En principio es fundamental definir el estado ta de 170 mmHg con aneurisma no ligado y
de conciencia pues, si se trata de un paciente hasta 200 mmHg con aneurisma ligado.
cuya escala de Glasgow (GCS) es menor de
8, la prioridad es la protección de la vía aérea. Cuando los pacientes requieren un inotrópico
En los pacientes severamente deteriorados el por razones de disfunción ventricular izquier-
vasoespasmo suele ser el factor desencade- da, el preferido es la dobutamina. Sin embar-
nante del deterioro. Si bien es cierto que un go, es fundamental recordar que éste es un
porcentaje alto de pacientes desarrolla vaso- medicamento vasodilatador y, si bien mejora
espasmo entre el tercero y el noveno día post- el rendimiento del ventrículo izquierdo, tam-
hemorragia, la mayoría de los pacientes a su bién produce disminución de la resistencia
ingreso presentan un grado variable de vaso- vascular periférica y puede inducir hipotensión.
espasmo cuya manifestación clínica es igual- Por esta razón la dobutamina siempre debe
mente variable. ser usada en conjunto con un vasoconstrictor
como la noradrenalina. Estos medicamentos
Debido a que concomitantemente estos pa- suelen ser aplicados en la unidad de cuidado
cientes tienen hipovolemia, como consecuen- intensivo y raramente en urgencias, donde el
cia del síndrome de cerebro perdedor de sal, enfoque primordial debe ser la reanimación
el compromiso del flujo sanguíneo cerebral es volumétrica.
severo. Si a esto se suma la hipertensión en-
docraneana por el edema y el sangrado, se La sangre en el espacio subaracnoideo produ-
habrán conjugado todos los factores que lle- ce dolor intenso que lleva a hipertensión se-
van a isquemia y necrosis del tejido nervioso cundaria. Así que una adecuada analgesia
con el deterioro de las funciones neurológicas. es mandatoria. Para ello los analgésicos intra-
Por esta razón la reanimación con líquidos del venosos del grupo de los antinflamatorios no
paciente con HSA debe ser agresiva, tratan- esteroideos están indicados (pues los opiá-
do de recuperar el volumen intravascular. Para ceos y sus derivados pueden producir altera-
ello el líquido de elección es la solución sali- ción del sensorio que simula deterioro neuroló-
na normal al 0,9%. La mejoría de la taquicardia gico). Sin embargo, a veces esa analgesia no
es un indicador adecuado de la reanimación. es suficiente y puede hacerse necesario el uso
de medicamentos del grupo del tramadol. La
Si bien es cierto que desde hace muchos años infusión debe hacerse lentamente para evitar
se ha propuesto el uso de la terapia hipervolé- hipotensión que comprometa el flujo sanguí-
mica “triple H” (Hipertensión–Hemodilución– neo cerebral.
Hipervolemia) para el manejo del vasoespas-
mo post HSA, esta terapéutica debe ser usa- La terapia anticonvulsivante profiláctica es de-
da con cuidado en pacientes con aneurisma batida, pero en general se recomienda el uso
no ligado, por el riesgo de resangrado agudo de un medicamento intravenoso que tenga
como consecuencia de la hipertensión. Tam- tanto acción sedante como anticonvulsivante

1193
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

y en ese sentido está indicado el fenobarbital debe ser muy cauteloso para evitar episodios
intravenoso en dosis de 100 mg cada 12 ho- de hipotensión, que son más riesgosos que
ras. Igualmente existe debate con respecto al la misma hipertensión.
uso de calcioantagonistas intravenosos para
el manejo de urgencias de la HSA. A pesar del mejor manejo disponible hoy en
día, un porcentaje significativo de pacientes
Si bien es cierto que estos medicamentos persiste con déficit neurológico inducido por
siempre están claramente indicados en HSA el vasoespasmo. Estos son los pacientes que
como protectores e incluso como tratamiento requieren una intervención endovascular ya
en casos de vasoespasmo, su uso IV no ha sea con angioplastia (si se trata de vasoespas-
sido aprobado por la FDA de los Estados Uni- mo de arterias del polígono de Willis) o con
dos. Sin embargo la EMEA (agencia regula- infusión intraarterial de papaverina (si se tra-
dora europea) los considera y en muchas par- ta de arterias distales). El tratamiento quirúr-
tes del mundo se utilizan libremente, incluyen- gico de emergencia se reserva para los pa-
do Colombia. Antes de usarlos en urgencias cientes con hidrocefalia aguda y/o hematomas
hay que recordar que calcioantagonistas como intraparenquimatosos o subdurales que re-
la nimodipina producen hipotensión y por tan- quieran de evacuación. La ligadura del aneu-
to se debe iniciar su goteo a una dosis más risma se debe realizar dentro de las siguien-
baja (0,5 mg/kg/hora), que se aumenta pro- tes 72 horas de ocurrido el sangrado si el vaso-
gresivamente de acuerdo con la tolerancia, espasmo no es significativo y el estado en la
hasta llegar a una dosis de 2 mg/kg/h. clasificación de Hunt–Hess es 1-2. Si por al-
gún motivo logístico o por las características
El paciente hipertenso con HSA entraña un di- del enfermo (Hunt–Hess >2) es imposible
lema de tratamiento, pues la hipertensión arte- intervenirlo en las primeras 72 horas, se re-
rial puede ser parte de un ‘fenómeno de comienda esperar 14 días para la cirugía.
Cushing’ que esté asegurando el flujo sanguí-
neo cerebral y disminuirla puede inducir isque-
mia. Básicamente lo recomendado es iniciar LECTURAS RECOMENDADAS
todas las terapias previamente mencionadas,
para controlar el dolor y disminuir la hiperten- 1. Awad I, Barnett G. Acute management of
sión endocraneana. El uso de calcioantagonis- subarachnoid hemorrhage. Neurosurgical Topics
tas intravenosos en estos pacientes es mucho 1994; 1:137-149.
2. Barker F, Ogilvy C. Efficacy of prohylactic
más seguro y puede ayudar a controlar la
nimodipine for delayed ischemic deficit after
hipertensión hasta los límites previamente des- subarachnoid hemorrhage. A metanalysis. J
critos (170 de sistólica en el paciente con aneu- Neurosurg 1996; 84:405-414.
risma no ligado y 200 con aneurisma ligado). 3. Castañuela C. Hipertensión endocraneana. Acta
Neurobiológica Colombiana 2001; 17:126-139.
Si a pesar del adecuado tratamiento el pacien- 4. Duke BJ, Breeze RE, Rubenstein D et al. Induced
te persiste severamente hipertenso, la medi- hypervolemia and inotropic support for acute ce-
cación de elección es el labetalol IV a dosis rebral arterial insufficiency: An underused therapy.
Sur Neurol 1998; 49:51-57.
de 2 mg/min y un máximo de 300 mg/día. Ja-
5. Fandiño J, Kaku Y, Schuknecht B, et al. Improve-
más se debe intentar disminuir la presión arte- ment of cerebral oxygenation patterns and metabo-
rial en más de 20% de la basal. La hiperten- lic validation of superselective intraarterial infusion
sión tiende a controlarse espontáneamente en of papaverine for the treatment of cerebral
las siguientes 24 horas, por lo que el manejo vasospasm. J Neurosurg 1998; 89:93-100.

1194
CAPÍTULO II: HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA

6. Feigin VL, Rinkel GJE, Algra A, Vermeulen M, et 12. Polin R, Apperson C, German P, et al. Intra-
al. Calcium antagonists in patients with aneurysmal arterially administrated papaverine for the
subarachnoid hemorrhage. A systematic review. treatment of symptomatic cerebral vasospasm.
Neurology 1998; 50:876-883. Neurosurgery 1998; 42:1256-1267.
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and demographics of mortality from subarachnoid Therapeutic modalities for the management of
hemorrhage. Neurology 1998; 50:1413-1418. cerebral vasospasm: Timing of endovascular
8. Laumer R Steinmeier R, Gröner F et al. Cerebral options. Neurosurgery 1999; 44:975-980.
hemodynamics in subarachnoid hemorrhage 14. Solomon R, Post K, McMurty J. Depression of
evaluated by transcranial Doppler sonography. circulating blood volume in patients after suba-
Part 2. Reliability of flow velocities in clinical rachnoid hemorrhage: Implications for the mana-
management. Neurosurgery 1993; 33:10-19. gement of symptomatic vasospasm. Neurosurgery
9. Laumer R Steinmeier R, Gröner F, et al. Cerebral 1984; 15:354-361.
hemodynamics in subarachnoid hemorrhage 15. Terada T, Kinoshita Y, Yokote H, et al. The effect
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hypervolemic therapy on cerebral blood flow after of transcranial doppler monitoring in the diagno-
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11. Levy M, Giannota S. Cardiac performance indices 17. Widjicks E, Schievnick W, Burnett J Natriuretic
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1195
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO III

Vértigo

Edgar Osuna, MD
Sección de Neurología, Fundación Santa Fe de Bogotá
Profesor Titular
Facultad de Medicina, Universidad Nacional de Colombia

Alejandro Tobón, MD
Residente de Neurología
Universidad El Bosque
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a sensación de mareo constituye una de


las consultas más frecuentes en un servi-
cio de urgencias. Los pacientes con esta
vidad neuronal y desencadenar la sensación
de vértigo.

sintomatología se pueden clasificar en una de


las siguientes categorías: HISTORIA Y EXAMEN FÍSICO
• Vértigo o sensación rotacional. Una vez se haya establecido que el paciente
• Desequilibrio o sensación de perder el ba- refiere sensación de vértigo verdadero, lo más
lance corporal. importante es evaluar la duración del sínto-
• Síncope o sensación de desvanecimiento. ma, forma de inicio y factores precipitantes
• Una sensación “ difícil de describir”. (tabla 1).

Solamente la primera categoría corresponde Vértigo Posicional Paroxístico Benigno


a vértigo verdadero y es el objeto de revisión (VPPB): Es la causa mas frecuente, se origina
en la presente guía. por la acumulación de productos de desecho
en el canal semicircular posterior, que ocasio-
nan desplazamientos anormales de la cúpula
FISIOPATOLOGÍA al mover la cabeza. Típicamente el paciente
refiere sensación de vértigo que dura menos
Normalmente los dos laberintos mantienen de un minuto y ocurre al mover la cabeza con
una actividad neural constante y simétrica respecto a la gravedad (por ejemplo al levan-
cuando la cabeza no está en movimiento. Al tarse de la cama, mirar hacia arriba, inclinar-
movilizar la cabeza en una dirección, un imba- se). Factores precipitantes frecuentes incluyen
lance en la actividad neural laberíntica es trauma craneoencefálico e infecciones virales,
percibida en el puente y otras estructuras cen- pero ocasionalmente la migraña, la enferme-
trales. Por lo tanto, una lesión en el laberinto, dad de Meniére y la neuronitis vestibular pue-
tallo cerebral, cerebelo o sus conexiones pue- den inducir VPPB. La enfermedad es usual-
de causar disbalance permanente de la acti- mente autolimitada a menos de dos semanas,

1196
CAPÍTULO III: VÉRTIGO

sin embargo en algunos casos puede durar años La enfermedad puede autolimitarse cada 2 ó
y la tasa de recurrencias es cercana a 20%. 3 años, pero puede recurrir varios años des-
pués. Si el tratamiento médico no es efectivo,
El diagnóstico se realiza con la maniobra de las alternativas terapéuticas incluyen aplica-
Dix-Hallpike. Al llevar la cabeza hacia el lado ción de gentamicina transtimpánica, laberin-
afectado se observa la presencia de nistag- tectomía o neurectomía vestibular.
mus con una latencia de 1-5 segundos y du-
ración menor a 1 minuto (usualmente 15 se- Migraña vestibular: corresponde a migrañas
gundos), acompañado de sensación de vérti- con un componente vertiginoso que predomi-
go. El tratamiento con la maniobra de Epley na sobre la cefalea. Con frecuencia los pacien-
es muy efectivo, con tasas de curación cerca- tes refieren fotofobia, fonofobia, aura visual e
historia personal o familiar de migraña. El tra-
nas al 90%.
tamiento es idéntico al de otros tipos de migra-
ña y para la profilaxis se pueden utilizar beta
Enfermedad de Meniére: es causada por
bloqueadores, ácido valproico y antidepre-
exceso de endolinfa, la cual distorsiona el la- sivos tricíclicos, entre otros.
berinto membranoso y desplaza la cúpula. La
historia clásica es de vértigo de aparición len- Neuronitis vestibular: el inicio de los sínto-
tamente progresiva, con varias horas de du- mas puede ser escalonado, lentamente pro-
ración y cese gradual. El vértigo se acompaña gresivo o, con mayor frecuencia, súbito. Pro-
de dolor auricular, sensación de presión en el duce nistagmus horizontal con la fase rápida
oído, tinitus y pérdida de audición. Ataques dirigida en sentido contrario al oído afectado.
repetidos originan pérdida de la función vesti- Los pacientes sufren de vértigo constante que
bular y auditiva. La electrococleografía puede dura días y cede lentamente. El tratamiento
se útil en el diagnóstico en casos difíciles si se realiza con benzodiazepinas tipo clonaze-
se realiza en las primeras 48 horas del ata- pam 0,25 mg dos veces al día a 1mg tres ve-
que. Sin embargo, la sensibilidad del examen ces al día. Cuando el vértigo se acompaña de
es sólo de 70%. Para el tratamiento se reco- pérdida de la audición, el manejo debe ser más
miendan dietas con 1,5 gramos de sodio, res- agresivo, adicionando prednisona 60 mg por
tricción de cafeína, utilización de acetazola- 7 días, con posterior descenso gradual hasta
mida 250 mg/día iniciales con incrementos suspenderla; se recomienda la utilización con-
graduales de 250 mg cada cuatro días. comitante de famciclovir 500 mg por 7 días.

TABLA 1. CAUSAS DE VÉRTIGO

ENFERMEDAD PRECIPITANTE APARICIÓN DURACIÓN


Vértigo posicional Movimientos de la cabeza Súbita Menos de 1 minuto
paroxístico VPPB
Ataque isquémico Ninguno Súbita 2-5 minutos
transitorio
Migraña Ninguno Minutos Horas
Enfermedad de Meniére Ninguno Minutos Horas
Neuronitis vestibular Ninguno Variable Días
ECV Ninguno Súbita Días
Ototoxicidad Movimientos de la cabeza/ Días Instantáneo
después de medicación

1197
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Ototoxicidad: usualmente es un fenómeno LECTURAS RECOMENDADAS


iatrogénico. Agentes causantes incluyen ami-
noglucósidos, gentamicina, salicilatos, cispla- 1. Baloh R, Halmagyi M. Disorders of the Vestibular
tino, vancomicina y antimaláricos, entre otros. System. Oxford University Press, New York ,1996.
El mejor tratamiento es la prevención, utilizan- 2. Baloh RW. Clinical practice. Vestibular neuritis. N
Engl J Med 2003; 348:1027-1032.
do otras opciones terapéuticas siempre que
3. Epley J. The canalith repositioning procedure: for
sea posible. En caso de presentarse los sín- treatment of benign paroxysmal positional vertigo.
tomas, debe suspenderse la medicación y rea- Otolaryngol Head Neck Surg 1992; 107:399-404.
lizar ejercicios vestibulares. 4. Furman J, Cass S, Bening paroxysmal positional
vertigo. N Engl J Med 1999; 341:1590-1596.
5. Hoston J, Baloh R. Acute vestibular syndrome. N
Engl J Med 1998; 339:680-685.
6. Johnson R. Current Therapy in Neurologic
Disease. New York. Mosby, 2002.

1198
CAPÍTULO IV: SÍNCOPE

CAPÍTULO IV

Síncope

Jorge Mario Salcedo, MD, FACEP


Jefe Departamento de Urgencias y Servicio de Trauma
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN ETIOPATOGENIA

S íncope es la pérdida súbita, transitoria y


autolimitada de la conciencia, con recu-
peración espontánea, completa y usualmen-
El mecanismo fisiológico que produce síncope
es la disfunción de los hemisferios cerebrales
o del sistema reticular activador (SRA). El es-
te rápida. Hay pérdida del tono postural se- tado de conciencia es mantenido por un ade-
cundaria a una inadecuada perfusión cerebral cuado flujo de perfusión cerebral. La autorre-
con sangre oxigenada. gulación vascular cerebral asegura que el flujo
se sostenga en un rango estrecho indepen-
diente de la presión sistémica; es así como
EPIDEMIOLOGÍA hasta un 35% de disminución en el flujo cere-
bral es tolerado. En un adulto joven la presión
Entre 12% y 48% de la población general pue- arterial sistólica puede descender a 70 mmHg
de experimentar síncope en algún momento sin isquemia cerebral significativa. En los an-
de su vida. Constituye más de 5% de las con- cianos y en personas con hipertensión crónica,
sultas a los servicios de urgencias. La inciden- caídas pequeñas en la presión arterial sisté-
cia anual es de 6% en pacientes mayores de mica incrementan la incidencia. A su vez, cual-
75 años. quier mecanismo que afecte los componentes
de la perfusión (gasto cardiaco, resistencia
La mayoría de las causas son benignas. La vascular sistémica, resistencia vascular cere-
tasa de mortalidad a un año es 6%. El síncope bral) puede causar o contribuir al síncope.
secundario a causas cardiacas acarrea un po- Otros mecanismos que pueden resultar en
bre pronóstico, con una mortalidad a un año síncope son: hipoglucemia, toxinas, anorma-
de 18-33%. lidades metabólicas, falla en la autorregulación
y alteraciones neurológicas primarias.
La recurrencia es hasta de 30%, particular-
mente en ancianos. Predominan las causas El síncope se puede clasificar según el me-
benignas en adolescentes y jóvenes; sin em- canismo productor en:
bargo, hasta 30% de los atletas que mueren
durante el ejercicio, han tenido síncope como SÍNCOPE MEDIADO NEURALMENTE (SMN)
evento centinela.
El SMN puede ser subclasificado en diversos
síndromes. Se asocia con vasodilatación

1199
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

aguda de los lechos vascular y venoso y bradi- alcohólica, la neuropatía diabética, la enferme-
cardia relativa o absoluta, debido a un inapro- dad de Addison, los síndromes paraneoplási-
piado reflejo en las vías aferentes, eferentes cos y durante períodos prolongados de inac-
y centrales. tividad, se presenta el síncope disautonómico.

Se encuentran diversos tipos de SMN:


1. Vasovagal (emocional). SÍNCOPE CARDIACO
2. Síncope del seno carotideo.
3. Síncope neurocardiogénico (síncope gravi- Puede ser la primera manifestación de una
tacional). enfermedad cardiaca estructural seria. Es un
4. Presión intratorácica aumentada (tos, ma- factor de predicción independiente de muerte
niobra de Valsalva, estornudo). súbita y de mortalidad tardía. Las causas pue-
5. Síncope postmiccional. den ser eléctricas (arritmias) o mecánicas
6. Síncope por estimulación gastrointestinal (obstructivas).
(examen rectal, defecación, instrumenta-
ción gastrointestinal). Los trastornos del ritmo son la causa más fre-
7. Síncope por estimulación nasofaringea o cuente y potencialmente fatal de sincope. La
esofágica (síncope postdeglución, neural- taquicardia ventricular (TV) representa el 11%
gia glosofaríngea). de todos los casos de síncope; los pacientes
8. Síncope inducido por drogas (cardiovas- con función ventricular deprimida o isquemia
culares, psicoactivos, digital, insulina. miocárdica se encuentran en particular ries-
9. Síncope por buceo. go de padecerla. La TV polimórfica relaciona-
da con intervalo QT prolongado es una causa
reconocida de síncope y muerte súbita.
SÍNCOPE ORTOSTÁTICO Y DISTURBIOS
DISAUTONÓMICOS En el paciente anciano, las bradiarritmias cau-
sadas por disfunción del nodo sinusal o por
El síncope ortostático resulta de la disminución enfermedad del tejido de conducción son im-
del volumen circulatorio, manifestado por des- portantes causas de síncope. Bloqueos
censo de la presión arterial y aumento de la auriculoventriculares de alto grado (II Mobitz
frecuencia cardiaca, cuando se cambia de la 2, III) pueden resultar en disminución del gasto
posición supina a la posición de pie. Puede cardíaco suficiente para producir síncope.
ser consecuencia de una depleción crónica o
transitoria del volumen circulatorio (sangrado La obstrucción al flujo de salida del ventrículo
gastrointestinal, deshidratación, diuresis exce- izquierdo clásicamente produce síncope con
siva, vasodilatadores) o de mecanismos com- el esfuerzo, y tiene un pronóstico pobre en
pensatorios vasomotores anormales. algunas patologías como la estenosis aórtica.
Arritmias ventriculares en pacientes jóvenes
Con los cambios en la postura, los barorre- son de alto valor de predicción de cardiomio-
ceptores provocan un incremento en el flujo patía hipertrófica.
simpático medular que conduce a vasocons-
tricción sistémica y esplácnica. En la disfun- El embolismo pulmonar (EP) recurrente au-
ción autonómica el paciente es incapaz de pro- menta la incidencia de síncope hasta en 10%
ducir la respuesta vasomotora apropiada. En al obstruir el flujo de sangre en la arteria pul-
algunas enfermedades como la neuropatía monar, lo cual reduce el gasto cardiaco.

1200
CAPÍTULO IV: SÍNCOPE

Otras causas de síncope de origen cardíaco es transitorio, y la mayoría de los pacientes


son raras, tales como mixoma auricular, este- se encuentran asintomáticos al ser evaluados
nosis mitral severa, disfunción de válvula en el servicio de urgencias.
protésica.
Por supuesto, si el paciente se presenta con
signos vitales normales o casi-normales, no
ENFERMEDAD NEUROLÓGICA se requiere estabilización inmediata. Debe to-
Y PSIQUIÁTRICA marse una historia clínica detallada. En el sub-
grupo de pacientes con episodios repetidos
En la ausencia de signos y síntomas neuroló- de síncope o síntomas asociados de importan-
gicos focales, el síncope por enfermedad cere- cia (por ejemplo dolor de tórax) debe investi-
brovascular es raro. El accidente isquémico garse la causa en forma expedita.
transitorio causado por insuficiencia vertebro-
basilar puede causar síncope. Pacientes con signos vitales alterados (prin-
cipalmente bradicardia o taquicardia severas,
La distinción entre convulsión y síncope llega hipotensión), demandan atención inmediata.
a ser difícil, especialmente cuando el pacien- Es conveniente lograr un acceso intravenoso
te experimenta “síncope convulsivo”, que pue- e iniciar vigilancia de la función cardiaca y
de ser consecuencia de hipoxia secundaria a pulmonar.
hipoperfusión cerebral.
El electrocardiograma (ECG) de 12 deriva-
La prevalencia de enfermedad siquiátrica en ciones es la principal herramienta para identi-
pacientes con síncope de origen desconoci- ficar y evaluar las causas cardíacas.
do es de 24%.

Ciertos individuos pueden experimentar sínco- HALLAZGOS GENERALES


pe sin alteraciones en la presión arterial, fre-
cuencia cardiaca, patrón electrocardiográfico Debido a que la mayoría de las causas de sín-
anormal o presión de perfusión cerebral; es cope son benignas, la evaluación inicial debe
secundario a desórdenes de somatización, lo enfocarse a excluir patologías serias. En aquel
que se denomina ‘“síncope psicógeno”. paciente joven y saludable, la historia clínica
y el examen físico son suficientes para llegar
al diagnóstico correcto. La eficacia del méto-
ABORDAJE DIAGNÓSTICO do clínico puede llegar a ser de 85%.

La principal consideración a tener en cuenta


es identificar las causas que pueden poner en HISTORIA CLÍNICA
peligro la vida del paciente.
Tanto el paciente como el acompañante deben
ser interrogados acerca del carácter del evento
EVALUACIÓN RÁPIDA Y ESTABILIZACIÓN sincopal. Características clave incluyen el ini-
cio gradual o súbito, la posición corporal y los
La sintomatología aguda y los signos vitales síntomas (decúbito, sentado, de pie), los tiem-
basales determinan la necesidad de estabili- pos de duración y de recuperación.
zación inmediata. Por definición, el síncope

1201
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La historia de los eventos precedentes es de da de signos de ortostatismo (aumento de la


mucha ayuda para establecer la causa. El re- frecuencia del pulso mayor de 20 latidos con
lato de inicio abrupto al pasar de la posición respecto al basal y disminución de la PA >10
de decúbito a sentado o a la de pie (ortotastis- mmHG cuando se adopta la posición sentado
mo) y con duración mayor de algunos segun- o de pie desde decúbito), frecuencia cardiaca
dos hace sospechar una causa seria como la y ritmo, frecuencia respiratoria y profundidad,
cardiaca o vascular por efectos de medica- temperatura y color de la piel, alteraciones del
mentos vasodilatadores o hipotensores, tales cuello (masas en la región de las carótidas),
como los beta-bloqueadores. La asociación estertores, sibilancias, soplos cardiacos, frote
con el esfuerzo sugiere obstrucción al flujo de cardíaco, masas abdominales, melenas, san-
salida; la exposición prolongada a temperatu- grado vaginal, masas anexiales, déficit de pul-
ras elevadas sugiere síncope por calor; even- so, estado mental, entre otros, deben ser debi-
tos emocionales, movimientos intestinales, damente evaluados.
vómito, manipulación del cuello (presión sobre
los senos carotídeos), sugieren respuesta
neurocardiogénica. ESTUDIOS ADICIONALES

Los síntomas asociados ofrecen importantes El estudio principal es el ECG de 12 deriva-


claves: el dolor torácico y la disnea sugieren ciones, el cual se debe realizar en todos los
enfermedad coronaria o enfermedad pulmo- pacientes con síncope, excepto jóvenes o ado-
nar; la diaforesis y la visión de luces son ha- lescentes sanos con causa plenamente esta-
llazgos no específicos, pero pueden sugerir blecida. Sirve para determinar cambios isqué-
ortostatismo o causas vasovagales; la morde- micos, arritmias, acortamiento del segmento
dura de la lengua y la incontinencia urinaria PR, alargamiento del segmento QT y patro-
sugieren convulsiones. nes alternantes que ayudan a identificar algu-
nas patologías como infarto agudo del miocar-
La historia médica pasada es importante para dio, enfermedad pulmonar, pericarditis con
estratificar la necesidad de hospitalización y taponamiento pericardico.
predecir la mortalidad. Los pacientes con sín-
cope relacionado con ortostatismo, bloqueo Los exámenes rutinarios de sangre y orina tie-
cardíaco completo, enfermedad cerebral cró- nen limitada utilidad; sin embargo, el uso selec-
nica, cefalea migrañosa, estenosis aórtica o tivo del hemograma, la determinación de las
sangrado gastrointestinal, deben ser hospita- concentraciones séricas de electrolitos y gluco-
lizados. sa, de tóxicos en orina, la prueba de embarazo,
pueden excluir algunas causas poco frecuen-
Ciertos medicamentos se asocian con sínco- tes de síncope. Por supuesto, tales exámenes
pe, especialmente los beta-bloqueadores y las deben ser ordenados en forma racional según
drogas que prolongan el intervalo QT, así las condiciones individuales del paciente.
como la insulina y los hipoglicemiantes orales.
Los estudios radiográficos tienen limitada uti-
lidad y a menos que la patología sospechada
EXAMEN FÍSICO lo amerite, no están indicados.

Inicialmente se debe orientar hacia los siste- Una vez que el paciente sea dado de alta del
mas cardiovascular y neurológico. La búsque- servicio de urgencias, los exámenes de se-

1202
CAPÍTULO IV: SÍNCOPE

guimiento pueden ser de ayuda. Tal es el caso LECTURAS RECOMENDADAS


con la monitoría Holter de electrocardiografía
1. Arthur W, Kaye G. Important points in the clinical
continua durante 24 horas, la prueba de es- evaluation of patients with syncope. Postgrad Med
fuerzo, la resonancia nuclear magnética 2001; 77:99-102.
(RNM). El electroencefalograma (EEG) no es 2. Arthur W, Kaye G. The pathophysiology of common
útil a menos que se sospechen convulsiones. causes of syncope. Postgrad Med 2001; 76:750-753.
El Tilt-Table Test (mesa basculante), aunque 3. Brignole M, Alboni P, Benditt L, et al. Task Force on
Syncope, European Society of Cardiology. Part 1;
infrecuentemente usado, puede ser de ayuda the initial evaluation of patients with syncope.
en ancianos y niños en quienes se sospeche Europace 2001; 3:253-260.
hipotensión ortostática crónica. 4. Brignole M, Alboni P, Benditt L, et al. Task Force on
Syncope, European Society of Cardiology. Part 2;
Como medida de exclusión, la evaluación si- Diagnostic test and treatment: summary of
recommendations. Europace 2001; 3:261-268.
quiátrica formal puede ser una herramienta de 5. Linzer M, Yangs E, Estes M, et al. Diagnosing
ayuda, especialmente en aquellos pacientes syncope: Part 1: Value of history, physical exami-
con síncope frecuente y signos y síntomas no nation and electrocardiography. Am Coll Phys 1997;
compatibles. 126:989-996.
6. Linzer M, Yangs E, Estes M, et al. Diagnosing
syncope: Part 2: Unexplained syncope. Am Coll
Phys 1997; 127:76-86.
MANEJO Y DISPOSICIÓN 7. Martin T, Hanusa B, Kapoor W. Risk stratification of
patients with syncope. Ann Emerg Med 1997;
El tratamiento debe dirigirse a la causa, si ésta 29:459-466.
es conocida. Pacientes con diagnósticos de 8. Marx J, Hockberger R, Walls R, et al. Rosen’s,
Emergency Medicine, Concepts and Clinical Prac-
entidades potencialmente fatales deben ser tice. Fifth Edition. Mosby. St Louis, 2002.
hospitalizados en la unidad de cuidados in- 9. Witting D, Wears R, Li S. Defining the positive tilt
tensivos (UCI), con la interconsulta apropia- test: A study of healthy adults with moderate acute
da según la causa probable. blood loss. Ann Emerg Med 1994; 23:1320-1323.

1203
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Estado epiléptico

Luis Carlos Mayor, MD


Sección de Neurología
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN nutos, o dos crisis continuas sin recuperación


completa del estado de conciencia. Esta nue-

L a Organización Mundial de la Salud defi


ne el Estado Epiléptico (Status Epiléptico)
como “condición caracterizada por crisis epilép-
va tendencia se debe al hecho de que usual-
mente una crisis epiléptica y en especial una
crisis tonico-clónica, generalmente no tiene
ticas continuas que duran al menos 30 minutos una duración mayor de dos minutos y a que
o convulsiones repetitivas sin recuperación de en la medida que una crisis epiléptica se haga
la conciencia entre cada una con una duración más prolongada, su control se torna más difícil.
mayor o igual a 30 minutos”. La nueva clasifica-
ción de la Liga Internacional contra la Epilepsia
establece una definición operacional más am- CUADRO CLÍNICO
plia, considerándolo como “una crisis que no
muestra signos clínicos de detención después Clínicamente se emplean dos términos para
de una duración que va mas allá del promedio definir las crisis epilépticas:
de tiempo para las crisis de su tipo en la mayo-
ría de los pacientes, o crisis recurrentes sin re- • Crisis convulsivas: son aquellas que pre-
cuperación de la función basal interictal del sis- sentan actividad motora, tales como mio-
tema nervioso central “(Blum 1998). clonías, crisis tónicas, clónicas, atónicas y
tonico-clónicas.
Actualmente se considera una nueva defini- • Crisis no convulsivas: no presentan activi-
ción en la cual se plantea el estado epiléptico dad motora, como, por ejemplo, las ausen-
como una crisis con duración de más de 5 mi- cias y las crisis parciales complejas.

CLASIFICACIÓN DE LAS CRISIS EPILÉPTICAS


TABLA 1.
1. Crisis Generalizadas 2. Crisis Parciales
Tonico- clónicas Simples:
Tónicas Motoras
Clónicas Somatosensoriales
Ausencias Autonómicas
Atónicas Psíquicas
Mioclonías Complejas:
Simples con evolución a complejas
Parciales complejas
Complejas con generalización secundaria
3. Crisis No Clasificables

516
CAPÍTULO V: ESTADO EPILÉPTICO

Esta clasificación se fundamenta en criterios • Epilepsias de difícil control que ocasional-


clínicos y electroencefalográficos. En algunos mente se presenta con estados epilépticos
casos los pacientes pueden presentar dos o recurrentes (Síndrome de Lennox Gastaut,
más tipos de crisis, como ocurre en la epilep- etc).
sia mioclónica juvenil, donde se presentan
mioclonías aisladas o asociadas a crisis toni-
co-clónicas o ausencias. EVALUACIÓN Y ESTUDIOS
DIAGNÓSTICOS
La nueva clasificación de la ILAE 2001 divide
el estado epiléptico en la siguiente forma: 1. Primera Convulsión- Causa Desconocida
(estado de conciencia normal).
• Estado Epiléptico Generalizado • Niveles de glicemia, sodio y calcio, elec-
- Estado Epiléptico Generalizado Tonico- troencefalograma (EEG).
clónico. • Punción lumbar (PL) siempre si hay fie-
- Estado Epiléptico Clónico. bre o se sospecha de hemorragia suba-
- Estado Epiléptico Ausencias. racnoidea (HSA).
- Estado Epiléptico Tónico. • Tomografía axial computadorizada
- Estado Epiléptico Mioclónico. (TAC) de cráneo, simple y con contraste
• Estado Epiléptico Focal o resonancia magnética cerebral (RC).
- Epilepsia Parcial Continua de Kojevnikov. • Cuadro hemático, nitrógeno uréico san-
- Aura Continua. guineo (BUN), creatinina, magnesio,
- Estado Epiléptico Límbico (Estado potasio.
Psicomotor).
- Estado Hemiconvulsivo con Hemiparesia. 2. Primera Convulsión- Causa Desconocida
(Estado de conciencia anormal).
• Niveles de glicemia, sodio y calcio, EEG,
ETIOLOGÍA TAC de cráneo simple y con contraste o
RC.
Dentro de las causas más frecuentes de esta- • PL siempre si hay fiebre o sospecha HSA.
do epiléptico en nuestro medio se encuentran: • Hemograma, niveles de etanol y tóxicos,
gases arteriales, BUN (nitrógeno uréico
• Suspensión o disminución de la medicación sanguíneo), creatinina, magnesio, prue-
anticonvulsivante (ocasionalmente cambio ba de embarazo, ECG.
a un medicamento “genérico” supuesta-
mente de calidad). 3. Trastorno Convulsivo Conocido- Patrón
• Evento cerebro-vascular isquémico o he- Normal (Estado de conciencia normal).
morrágico. • Niveles de medicación anticonvulsivante.
• Trastorno metabólico (hiponatremia, hipo- • Otros exámenes según sugiera la His-
calcemia, hipoglicemia, etc.). toria clínica.
• Tóxicos o empleo de drogas recreacionales
(cocaína, etc.). 4. Trastorno Convulsivo Conocido- Patrón
• Infección de SNC (meningitis, encefalitis). Atípico o Estado de Conciencia Anormal.
• Trauma. • Niveles de glicemia, sodio y calcio, EEG,
• Tumor cerebral. TAC de cráneo simple y con contraste o
• Primera manifestación de una epilepsia. RC.

517
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• PL siempre si hay fiebre o sospecha de Crisis parciales: pueden manejarse con los
HSA. mismos medicamentos, pero en forma menos
• Hemograma, niveles de etanol y tóxicos, agresiva. Es posible que en algunos de estos
gases arteriales, BUN, creatinina, mag- casos sea más difícil el control, especialmente
nesio, prueba de embarazo, ECG. cuando se asocian con eventos cerebrovas-
culares agudos o con alguna otra lesión cere-
5. Alcohólicos bral estructural.
• Niveles de glicemia, sodio, magnesio y
calcio, EEG, TAC Cráneo simple y con
contraste o RC. ESTADO EPILÉPTICO
• PL siempre si hay fiebre o sospecha de
HSA. 1. ABC.
• Hemograma, niveles de etanol y tóxicos, 2. Monitoría ECG y respiratoria.
gases arteriales, BUN, creatinina, mag- 3. Control de temperatura.
nesio, prueba de embarazo, ECG. 4. Acceso IV con SSN.
5. Tiamina 100 mg IV.
6. Consideraciones Especiales: Paciente con 6. DAD 50% 2 mL/kg en bolo inmediatamente.
Historia o Hallazgos Sugestivos de: 7. Diazepam 0,3 mg/kg en 1-2 minutos o 10
• Coagulopatía, trastorno plaquetario o mg IV en adultos; opcional: lorazepam 0,1
uso de anticoagulantes: hemograma, mg/kg IV a 1-2 mg/minuto; opcional:
pruebas de coagulación, TAC de cráneo clonazepan 0,01-0,02 mg/kg IV en 1-2 mi-
simple. nutos.
• Insuficiencia renal: sodio, potasio, cal- 8. Posteriormente fenitoína 15-20 mg/kg di-
cio, magnesio, BUN, creatinina. luida en SSN, pasar en mínimo 20 minutos.
• VIH/Inmunosupresión: hemograma, 9. Si no se logra control, dosis adicional de
ELISA HIV, PL, RC. diazepam 0,3 mg/kg (máximo 20 mg).
• Ingestión o exposición a tóxicos: etano- 10. Si no se logra control, dosis adicional de
lemia, pruebas toxicológicas. fenitoína 10 mg/kg o fenobarbital 20 mg/kg
• Síndrome QT largo: ECG. IV a 50 mg/min.
• Cáncer: RC. 11. Si se obtiene control, el paciente debe ser
• Trauma craneoencefálico (TCE): TAC de valorado por neurología y traslado a UCI.
cráneo simple y con contraste.
• Meningismo: PL, TAC de cráneo simple
y con contraste o RC. COMPLICACIONES
• Encefalopatía hipóxica.
TRATAMIENTO • Hipertensión / hipotensión arterial.
• Broncoaspiración.
Generalizado tonico-clónico: siendo el que • Edema pulmonar neurogénico.
pone en mayor riesgo la vida del paciente, se • Insuficiencia renal aguda por rabdomiolisis.
debe proceder con rapidez para lograr un buen • Fracturas óseas o aplastamiento de cuer-
y rápido control; entre mayor sea el tiempo pos vertebrales.
transcurrido se hace más difícil lograr el control • Arritmias.
de la crisis. • Colapso cardiovascular.

518
CAPÍTULO V: ESTADO EPILÉPTICO

LECTURAS RECOMENDADAS 6. Engel J. Epilepsy. A Comprehensive Textbook.


Lipincott-Raven Publishers. Philadelphia, 1998.
1. Blum D. Antiepileptic drug development. Advances 7. Faught E. Choice of antiepileptic drug II:
Mechanisms of action and efficacy. Annual
in Neurology. Lipincott-Raven Publisher.
Education Program AAN, 1998.
Philadelphia,1998.
8. Johnson R. Current therapy in Neurologic Disease.
2. Bradford J, Kyriakedes C. Evaluation of the patient
Mosby. St Louis, 2002.
with seizures: An evidence based approach. 9. Josemir W, Sauder S. New drugs for epilepsy.
Emerg Clin North Am 1999; 17:203-220. Current opinion in neurology. 1998; 11:141-148.
3. Brown T, Holmes G. Epilepsy. N Engl J Med 2001; 10. Privitera M. Evidence based medicine and
344:1145-1151. antiepileptic drugs. Epilepsia. 1999; 40:47S-56S.
4. Devinsky O. Patients with refractory seizures. N 11. Privitera M. Clinical manifestations of seizures.
Engl J Med 1999; 340:1565-1570. Annual Education Program AAN, 2000.
5. Dichter M. New antiepileptic drugs. N Engl J Med 12. Sirven J. Diagnosis and managment of status
1996; 334:1583-1590. epilepticus. Annual Education Program AAN, 1998.

519
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Meningitis aguda

Erick Sánchez Pérez, MD


Profesor Asociado
Facultad Medicina de la Pontificia Universidad Javeriana

Iván Mauricio Peña Castellanos, MD


Residente IV de Neurología,
Pontificia Universidad Javeriana

EPIDEMIOLOGÍA

L as meningitis tanto asépticas como


bacterianas pueden presentarse en cual-
quier parte del mundo, y su incidencia más
y en receptores de trasplantes de médula o
de un órgano sólido.

bien varía según el grupo de edad, el estado La meningitis bacteriana permanece dentro
previo de salud y el nivel socioeconómico. La del grupo de entidades de alta mortalidad y
meningitis de etiología viral es responsable de frecuentes y severas secuelas neurológicas.
95-98% de todos los casos, siendo los entero- Se conoce que hasta 25% de los adultos y
virus la causa más común de meningitis virales 60% de los niños que han desarrollado la en-
y el S. pneumoniae la causa más común de fermedad pueden llegar a tener secuelas neu-
meningitis bacteriana en el adulto. rológicas, con especial alteración de la agu-
deza auditiva y retardo mental.
La epidemiología ha variado en los últimos
años debido a la aparición de la vacuna conju- En los países desarrollados la tasa de morta-
gada contra el H. influenzae; la incidencia en lidad alcanza hasta 20% en el caso de la me-
los países que la adoptaron en sus planes de ningitis por neumococo, y hasta 40% en perso-
inmunización obligatoria, cambió drásticamen- nas ancianas; sin embargo, en los países en
te de manera tal, que en la actualidad el pico desarrollo la mortalidad es significativamente
de incidencia pasó de los infantes (15 meses) más alta, hasta 50% de todos los casos, con
a los adultos jóvenes, con una edad media de secuelas hasta en 60% de los sobrevivientes.
25 años.
A escala mundial se estima una incidencia
La primera causa bacteriana es el S. pneumo- anual de dos millones de casos, 13.5000 de
niae, seguido por N. meningitidis. Se observa los cuales son fatales; estos números man-
un aumento de las meningitis causadas por tienen a la meningitis bacteriana aguda como
Listeria monocytogenes, especialmente en pa- una de las 10 primeras causas de mortalidad
cientes con supresión de la inmunidad celular de origen infeccioso a nivel mundial.

1208
CAPÍTULO VI: MENINGITIS AGUDA

FISIOPATOLOGÍA supurativa o séptica. El proceso también pue-


de ser causado por virus, sustancias químicas,
El desenlace fatal de esta enfermedad es cau- medicamentos o ser parte de un proceso sisté-
sado frecuentemente por complicaciones neu- mico que produce reacción inflamatoria me-
rológicas (infarto cerebral, edema, hidrocefa- níngea aguda de tipo aséptico.
lia o hipertensión endocraneana). Los estudios
clínicos y neuropatológicos han demostrado En la meningitis aséptica los agentes microbio-
claramente que los mecanismos de defensa lógicos causantes no suelen ser identificados
dentro del cerebro son ineficaces en cuanto a por los métodos de laboratorio habituales; sin
eliminar los microorganismos causales, y que embargo, mediante la reacción en cadena de
la reacción inflamatoria al patógeno, más que polimerasa se ha demostrado que el agente
el patógeno mismo, es en gran parte la res- etiológico en 85-95% de los casos de menin-
ponsable del daño que ocasiona la meningitis gitis viral son los enterovirus. Otros tipos de
bacteriana. virus, bacterias atípicas, hongos, también pue-
den ser causales de un cuadro de meningitis
El sistema nervioso central (SNC) está prote- aséptica, como se resume en la siguiente
gido contra la invasión bacteriana en forma tabla.
efectiva por la barrera hematoencefálica y por
una cubierta externa de leptomeninges y la
bóveda ósea; para que un patógeno sea capaz ETIOLOGÍA MENINGITIS ASÉPTICA
de ocasionar infección en el SNC se requiere
que haya un defecto en la barrera externa o Comunes
que posea la capacidad de superar las defen- Virus Enterovirus, Arbovirus, Herpes virus
sas biológicas del huésped. Las etapas de Bacterias Borrelia burgdorferi (Enf. Lyme),
este proceso pueden ser esquematizadas así:
Menos comunes
1 Colonización de la mucosa nasofaríngea. Virus CMV, HIV, Parotiditis, EBV, HHV-6
2 Invasión y supervivencia en el espacio Bacterias TBC, Leptospira, T. pallidum
intravascular. Otros Hongos
3 Traspaso de la barrera hematoencefálica.
4 Activación de la respuesta inmune infla-
matoria. La sintomatología, tanto en niños como en
5 Lesión neuronal secundaria. adultos, incluye fiebre, fotofobia, malestar ge-
neral, cefalea, náusea, vómito y grados varia-
bles de alteraciones de conciencia. En los ni-
DEFINICIÓN Y CONTEXTO ños pequeños y en neonatos puede presen-
CLÍNICO tarse sólo irritabilidad, fiebre y convulsiones.
En los ancianos se puede presentar un esta-
La meningitis aguda es un proceso fisiopatoló- do confusional acompañado de fiebre.
gico que se manifiesta por cambios inflamato-
rios en el líquido cefalorraquídeo, de menos Los signos de irritación meníngea incluyen ri-
de una semana de duración y que puede ser gidez nucal, hiperalgesia ocular, signos de
de causa infecciosa o no infecciosa. Cuando Kernig y Brudzinski, los cuales son poco es-
se produce por colonización bacteriana del es- pecíficos en los extremos de la vida y en pa-
pacio subaracnoideo se denomina bacteriana, cientes sometidos a inmunosupresión.

1209
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RECOMENDACIONES En la meningitis viral se encuentra pleocitosis


DIAGNÓSTICAS INVASORAS de predominio linfocitario, con proteínas nor-
Y NO INVASORAS males o levemente aumentadas y glucosa nor-
mal. Se debe tener en cuenta que en casos
La punción lumbar diagnóstica es mandatoria, de meningitis virales en fase temprana es po-
en ausencia de contraindicaciones como infec- sible observar un predominio neutrofílico que
ción local en el sitio de punción, coagulopatías, cambia a linfocitosis en las primeras 48 horas;
trombocitopenia, signos de hipertensión endo- en estos casos, o cuando existen dudas con
craneana o signos de focalización neurológica. respecto a la posibilidad etiológica, se reco-
Cuando existe hipertensión endocraneana y mienda realizar una punción lumbar de control
focalización neurológica, el paciente debe ser a las 72 horas. La determinación del agente
llevado a estudios de imágenes cerebrales por etiológico puede realizarse por PCR, que tiene
tomografía axial computadorizada (TAC) o re- sensibilidad y especificidad de 100% en el
sonancia magnética para identificar lesiones caso de enterovirus. Su mayor importancia
focales. Se ha comprobado que en ausencia reside el diagnóstico preciso de infección por
de signos de hipertensión endocraneana o de herpes simplex I y II y varicela zoster.
anormalidades en el examen neurológico, las
imágenes cerebrales son normales en 97% En el caso de la meningitis tuberculosa, la sen-
de los casos. sibilidad y especificidad de la PCR depende
de varios factores adicionales al tiempo de
El líquido cefalorraquídeo (LCR) se extrae por evolución del cuadro y al inicio de terapia anti-
punción lumbar para el diagnóstico del proce- biótica. Comercialmente existen pruebas para
so inflamatorio meníngeo por estudio citoquí- herpes virus tipo I y II, varicela zoster, entero-
mico y microbiológico. En la meningitis bacte- virus, Epstein-Barr, citomegalovirus, herpes
riana existe aumento de la celularidad a ex- virus humano tipo 6, y virus del Nilo occiden-
pensas de polimorfonucleares en el 90% de tal. En términos generales, en nuestro medio
los casos, con disminución de la concentración no se realizan rutinariamente.
de glucosa a un valor menor de 2/3 de la glice-
mia central, junto con aumento de proteínas.
En el análisis bacteriológico se puede realizar EVALUACIÓN INICIAL Y MANEJO
aglutinación de látex para bacterias, que tiene PREHOSPITALARIO
la ventaja de ser un procedimiento rápido y
preciso para gérmenes como H. influenzae, Los pacientes con diagnóstico de meningitis
N. meningitidis y S. pneumoniae. La detec- aguda deben ser examinados en búsqueda
ción de antígenos bacterianos es también de de focos parameníngeos que puedan ser el
gran ayuda, debido a que permanecen positi- origen del proceso y, de acuerdo con el com-
vos entre 1 y 10 días después del inicio de la promiso sistémico, estudiar la posibilidad de
terapia antibiótica. El cultivo de LCR ofrece sepsis.
un diagnóstico exacto, pero tiene la desven-
taja del tiempo que se necesita para identifi- Es importante tener en cuenta las entidades
car el agente causante. Es positivo en 80% sistémicas capaces de agravar el cuadro clí-
de los casos de meningitis por S. pneumoniae, nico, como diabetes o SIDA/VIH, y en los
90% cuando es por N. meningitidis y 94% por pacientes afectados se debe realizar una eva-
H. influenzae. luación clínica y paraclínica aun más exhaus-
tiva.

1210
CAPÍTULO VI: MENINGITIS AGUDA

Se debe dar soporte general inicial, corrigien- teriana mientas se identifica el germen
do posibles desequilibrios hidroelectrolíticos, causante mediante estudios inmunológicos y
para iniciar posteriormente la terapia antibac- cultivos.

ANTIBIOTICOTERAPIA EMPÍRICA
Evidencia III Recomendación B

GRUPO DE EDAD ANTIBIÓTICO


Neonatos Ampicilina + gentamicina
Menores de 3 meses o mayores de 50 años Ceftriaxona + ampicilina
Adultos inmunocompetentes Cefalosporinas de 3ª generación, ceftriaxona 2ª opción. cefalosporinas de
4ª generación - cefepima
Trauma craneoencefálico o neurocirugía Ceftriaxona + vancomicina
Paciente inmunosuprimido Ceftriaxona + ampicilina
Adultos con gérmenes meticilinorresistentes Agregar vancomicina
Sospecha de L. monocytogenes Ampicilina + gentamicina

Se ha establecido la utilidad de la dexameta- para VIH, dada la posibilidad de inmunosu-


sona en adultos con meningitis bacteriana presión subyacente o que el cuadro corres-
para disminuir la morbimortalidad y las secue- ponda a una meningitis viral aguda por VIH
las neurológicas. Se recomienda la utilización asociada al proceso de seroconversión, la cual
de dexametasona en dosis de 10 mg IV cada puede aparecer hasta en 17% de los pacien-
seis horas durante cuatro días. Se recomien- tes con infección por VIH.
da la desparasitación de los pacientes al ini-
ciar el tratamiento, para prevenir infestaciones
sistémicas con S.stercolaris, teniendo en
cuenta estas altas dosis de esteroides. MANEJO HOSPITALARIO
GENERAL
En niños con meningitis bacteriana, en espe-
cial la causada por H. influenzae, se ha de- En el manejo inicial del paciente con meningi-
mostrado disminución de la mortalidad y de tis aguda se inicia hidratación con líquidos pa-
las secuelas auditivas con dexametasona en renterales, teniendo cuidado de no producir
dosis de 0,15 mg/kg/6h por cuatro días (Evi- sobrehidratación por la posibilidad de inducir
dencia I, Recomendación A). el síndrome de secreción inadecuada de hor-
mona antidiurética. Los analgésicos por vía
En las meningitis virales se continúa manejo oral o parenteral están indicados ante la pre-
sintomático con analgésicos del tipo de aceta- sencia de cefalea. Se debe ofrecer soporte
minofén y soporte general. nutricional adecuado desde el ingreso.

En todos los casos se debe obtener el con- Una vez identificado el germen, se procede
sentimiento para realizar prueba de ELISA con la terapia antibiótica específica:

1211
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ELECCIÓN DEL ANTIBIÓTICO ESPECÍFICO DE ACUERDO AL GRUPO


DE EDAD Y AGENTE ETIOLÓGICO
Evidencia III Recomendación B

GRUPO DE EDAD AGENTE ANTIMICROBIANO


Neonatos Estreptococo del grupo B, E. coli Penicilina o ampicilina cefotaxime o ceftriaxone
Niños—H. influenzae tipo B, S. pneumoniae, N. meningitidis Cefotaxime o ceftriaxone penicilina G o ampicilina

ELECCIÓN DEL ANTIBIÓTICO ESPECÍFICO DE ACUERDO AL


GRUPO DE EDAD Y AGENTE ETIOLÓGICO
Evidencia III Recomendación B

GRUPO DE EDAD AGENTE ANTIMICROBIANO


Adultos N. meningitidis, Bacilos gramnegativos excepto Penicilina G o ampicilina cefalosporina de tercera
P. aeruginosa, P. aeruginosa, H. influenzae, S. pneumoniae, generación. ceftazidime o meropenem cefalosporina
S. aureous meticilinosensible de tercera generación. nafcilina u oxacilina
Ancianos e inmunosuprimidos Listeria Ampicilina + gentamicina

DURACIÓN DE LA ANTIBIOTICOTERAPIA
GERMEN DÍAS SUGERIDOS
H. influenzae 7
N. meningitidis 7
S. pneumoniae 10 a 14
L. monocytogenes 14 a 21
Estreptococo del grupo B 14 a 21
Bacilos gramnegativos, S. aureus 21

MANEJO MÉDICO INTENSIVO


Los pacientes con complicaciones graves de Se puede encontrar hipertensión endocranea-
la meningitis bacteriana como sepsis, absce- na hasta en 30% de los adultos que fallecen
sos cerebrales, hipertensión intracraneana, por meningitis bacteriana. El tratamiento de
enfermedad cerebrovascular, hidrocefalia o la hipertensión intracraneana es vital para
trombosis de senos venosos con deterioro de mantener una adecuada presión de perfusión
conciencia deben ser tratados en una unidad cerebral. La forma más rápida para disminuir
de cuidado intensivo. la presión es por medio de hiperventilación,

1212
CAPÍTULO VI: MENINGITIS AGUDA

manteniendo una PCO2 en 25-30 mmHg para PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN


causar vasoconstricción cerebral. El trata-
miento con diuréticos es muy discutido; se ha Desde la aparición de las vacunas contra el
propuesto el incremento de la osmolaridad H. influenzae, la incidencia de este patógeno
sérica a 315-320 mOsm/l por medio de la ad- como agente causal declina dramáticamente,
ministración de glicerol 1 g/kg en solución al y en la actualidad representa un porcentaje
50% por vía enteral o al 10% por vía parenteral casi nulo como causa de meningitis bacteriana
por vena central, o por medio de manitol en en los países donde está generalizado el uso
dosis de 0,25-0-5 mg/kg de solución al 20% de la vacuna. Infortunadamente, en muchos
en cuatro horas. países del tercer mundo el costo relativamen-
te alto impide su uso masivo, lo cual se tradu-
ce en la presencia permanente de enferme-
RECOMENDACIONES DEFINITIVAS dad severa por H. influenzae.

Una vez completado el período de tratamien- En la misma forma, la vacuna heptavalente


to antibiótico, el paciente puede ser dado de contra el S. pneumoniae ha demostrado evi-
alta, explicándole los signos de alarma que tar la enfermedad invasora (bacteremia y me-
debe reportar, tales como reaparición de cefa- ningitis) por este germen. Ofrece la esperan-
lea, fiebre o síntomas específicos relaciona- za de poder disminuir la incidencia de menin-
dos con el sistema nervioso central. Tan pronto gitis. Otra vez, su alto costo ha impedido la
como la situación sea estable, se inicia reha- generalización de esta vacunación.
bilitación temprana para corregir las posibles
Existe en la actualidad una vacuna contra el
secuelas que se hayan presentado.
grupo C de N. meningitidis; sin embargo, da-
das las variaciones geográficas y temporales
En los casos en que haya habido convulsio-
en la prevalencia de los diferentes grupos, una
nes, se debe continuar el tratamiento anticon-
vacuna que espere obtener un impacto real
vulsivo instaurado, dada la posibilidad de re-
en la incidencia de infección por este germen
cidiva debido a lesiones estructurales perma-
debe incluir a la totalidad de los grupos.
nentes secundarias al proceso infeccioso.
Los casos de meningitis bacteriana deben ser
notificados a las autoridades sanitarias, es-
CUIDADO AMBULATORIO pecialmente cuando se confirman N. meningi-
tidis o H. influenzae como agentes causales,
Incluye la vigilancia periódica para identificar dada la alta posibilidad de contagio persona
recaídas o complicaciones tardías. En los ca- a persona, especialmente en recintos cerra-
sos de secuelas neurológicas se debe conti- dos o sitios de aglomeración (instituciones
nuar con el programa de rehabilitación iniciado educativas y guarderías, entre otros).
en forma temprana en el hospital.
Los contactos cercanos (expuestos a secre-
ciones orofaríngeas, o por compartir juguetes,
alimentos o bebidas) deben recibir profilaxis
con una dosis única de ciprofloxacina 500 mg
por vía oral, o rifampicina 600 mg por vía oral
cada 12 horas por dos días o azitromicina 500
mg por vía oral en dosis única.

1213
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS meningitis: A meta-analysis of randomized clinical


trials since 1988. JAMA 1997; 278:925-931.
11. Moller K, Skinhoj P, Knudsen GM, et al. Effect of
1. Adams WG, Deaver KA, Cochi SL. Decline of short-term hyperventilation on cerebral blood flow
hildhood Haemophilus influenzae Type B (Hib) autoregulation in patients with acute bacterial
disease in the Hib vaccine era. JAMA 1993; meningitis. Stroke 2000; 31: 116-122.
269:221-225. 12. Morris SM. Suggested dosing regimens and
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treatment of viral encephalitis. Postg Med J 2002; nervous system infections. Semin Neurol 2000;
78:575-583. 20: 393-396.
3. Coyle P.K., MD. Glucocorticoids in central nervous 13. Newton PJ, Newsholme W, Brink NS, et al. Acute
system bacterial infection. Ach Neurol 1999; meningoencephalitis and meningitis due to primary
56:796-801. HIV infection. BMJ 2002; 325: 1225-1227.
4. De Gans J, Van De Beek D. The European 14. Quagliarello VJ, Scheld M. Treatment of bacterial
Dexamethasone in Adulthood Bacterial Meningi- meningitis. N Engl J Med 1997; 336:708-716.
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347:1549-56. 16. Robart HA. Diagnosis of enteroviral meningitis with
1. Espinal C. Espinosa G, Upegui G. Epidemiología the polymerase chain reaction. J Pediatr 1990;
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Rev Col Infectologia 1999; 3:74-87. 17. Roos KL. Acute bacterial meningitis. Semin Neurol
5. Jasbun R, Abrahams J, Jekel J, et al. Computed 2000; 20: 293-306.
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in adults with suspected meningitis. N Engl J Med and other etiologies of the aseptic meningitis
2001; 345:1727-1733. syndrome. Semin Neurol 2000; 20: 329-335.
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Development of vaccines against meningococcal anti-inflammatory treatment of bacterial meningi-
disease. Lancet 2002; 359:1499-1508. tis. Infect Dis Clin North Am 1999; 13:619-635.
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Pathophysiology of bacterial meningitis: central nervous system infections. Infect Dis Clin
mechanisms of neuronal injury. J Infect Dis 2002; North Am 2001; 15:1047-1071.
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10. McIntyre PB, Berkey CS, King SM, et al. controversies In approaches to treatment. CNS
Dexamethasone as adjunctive therapy in bacterial Drugs 2001; 15:909-919.

1214
CAPÍTULO VII: CRISIS CONVULSIVA/ESTADO DE MAL EPILÉPTICO

CAPÍTULO VII

Crisis convulsiva/estado de mal epiléptico

Yuri Takeuchi, MD
Unidad de Neurociencias
Fundación Clínica Valle de Lili
Cali

U na crisis convulsiva es el resultado de una


descarga neuronal súbita, excesiva y des-
ordenada. Se origina por inestabilidad de la
personas, de las cuales el 28% acude anual-
mente a urgencias con crisis convulsivas.

membrana de las neuronas, causada por En la tercera parte de los casos el estado con-
hiperexcitación o por pérdida de los mecanis- vulsivo es la primera manifestación de un tras-
mos normales de inhibición. Puede ser el re- torno epiléptico crónico y presenta una tasa
sultado de una condición médica subyacente de mortalidad hasta del 20%.
o la manifestación de una lesión aguda o cró-
nica sobre el sistema nervioso central (SNC). En Colombia, la prevalencia de la epilepsia
se acerca a 10.8/1000 habitantes.
Se habla de estado convulsivo cuando el pa-
ciente presenta convulsiones continuas o in-
termitentes que duran 30 minutos o más, du- ETIOLOGÍA
rante los cuales no recupera la conciencia.
La causa más frecuente de crisis y estado
Para algunos autores el límite de tiempo son convulsivo es la suspensión del medicamen-
cinco minutos, pues, una vez excedido éste, to antiepiléptico en un paciente con epilepsia
se superan los mecanismos neuronales endó- reconocida. La crisis puede ser la primera ma-
genos capaces de “apagar” la convulsión. nifestación de un trastorno convulsivo de cau-
Cuando se excede de 30 minutos suele pre- sa no demostrable (epilepsia idiopática) o ser
sentarse lesión cerebral irreversible. la manifestación de múltiples condiciones ce-
rebrales o sistémicas, agudas o crónicas:

EPIDEMIOLOGÍA Procesos agudos: accidente cerebro-vascu-


lar (ACV), trauma craneo-encefálico (TCE),
El estado convulsivo es una emergencia mé- infección del SNC, toxicidad por drogas, sep-
dica que se presenta con frecuencia en la co- sis, lesión hipóxica/anóxica cerebral, encefalo-
munidad, salas de urgencia y unidades de patías metabólicas, desequilibrio electrolítico,
cuidado intensivo (UCI). Afecta a 14.000 per- hipoglicemia, entre otros.
sonas cada año en el Reino Unido y 50 por
100.000 por año en Estados Unidos. Procesos crónicos: tumor o lesión ocupante
de espacio en SNC, alcoholismo, suspensión
La epilepsia afecta al 2% de la población ge- del anticonvulsivante.
neral de los Estados Unidos, 2,5 millones de

1215
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DIAGNÓSTICO descontrolada; por lo tanto, la ventana de tra-


tamiento es limitada: “el tiempo es cerebro”.
El diagnóstico es clínico; por lo tanto, se debe
recalcar la importancia de una historia clínica La terapia debe ser simultánea en 4 frentes:
detallada obtenida del paciente o de los obser-
vadores del evento y describir secuencialmen- 1. Terminación de las convulsiones.
te las características antes, durante y después 2. Prevención de la recurrencia una vez el
de la crisis. Es importante determinar si se tra- estado convulsivo sea controlado.
ta de un primer episodio o de un paciente epi- 3. Manejo de las causas precipitantes.
léptico conocido, si tiene antecedentes de en- 4. Manejo de las complicaciones
fermedades médicas concomitantes (diabe-
tes, falla hepática o renal) y los medicamentos Medidas Generales
que recibe, antecedentes de TCE o de uso/ (A-B-C de la reanimación)
abuso de sustancias tóxicas (drogas, alcohol). • Controlar la vía aérea y administrar oxíge-
no suplementario.
En el examen físico se deben buscar signos • Asegurar una función cardio-respiratoria
neurológicos focales y estigmas de trauma o adecuada.
signos de enfermedades sistémicas. • Canalizar una vena periférica para admi-
nistración de líquidos y medicamentos.
Exámenes paraclínicos: hemograma, elec- • Monitorizar los signos vitales incluida tem-
trolitos, calcemia, gases arteriales, pruebas de peratura, oximetría de pulsos y EKG.
función hepática y renal, niveles de anticon- • Realizar glucometría rápida.
vulsivantes y tamizaje toxicológico. Realizar
punción lumbar si se sospecha infección del Medidas Específicas
SNC. Administrar tiamina 100mg IV + infusión de
50 g de glucosa: 125mL de DAD10%, si se
La escanografía cerebral (TAC) en urgencias desconoce la causa.
es de gran utilidad, especialmente en crisis Anticonvulsivantes de primera línea (benzo-
de aparición tardía o de origen focal para iden- diazepinas y fenitoína). El 80% de los esta-
tificar lesión estructural, tumor cerebral o tras- dos convulsivos revierten con este manejo.
torno vascular (hemorragias o infartos). Pos-
teriormente podrá requerirse una resonancia Benzodiazepinas (BDZ): se prefiere el loraze-
magnética cerebral. pam por tener una acción anticonvulsivante
inicial más duradera (menor redistribución). En
El electroencefalograma no se efectúa de ur- nuestro medio no hay disponible lorazepam
gencia. Sin embargo, posteriormente es útil endovenoso, por lo cual se recomienda el uso
en el diagnóstico diferencial (principalmente de clonazepam cuya farmacocinética es simi-
cuando se sospecha pseudocrisis o estado de lar. Se debe recordar que todas las BDZs son
mal epiléptico no convulsivo). potentes depresores respiratorios:

Lorazepam (Ativán®): dosis inicial: 0.1 mg/


TRATAMIENTO kg. Infusión 2 mg/min.

La descompensación metabólica cerebral ocu- Clonazepam (Rivotril®): dosis inicial 0,01-0,09


rre a los 30 minutos de actividad convulsiva mg/kg IV; 1-4 mg (max 10mg) infusión 1mg/2min.

1216
CAPÍTULO VII: CRISIS CONVULSIVA/ESTADO DE MAL EPILÉPTICO

Diazepam 0,1mg/kg IV. • Tiopental (Pentotal®): bolo inicial IV de 5


mg/kg.‘•Bolos de 1-2 mg/kg hasta que ceda
Midazolam 0,.1-0,3 mg/kg IV. la convulsión. Continuar la infusión de 5mg/
kg/hora.
Fenitoína (Epamín®): 15-20 mg/kg IV bolo, a
una velocidad de infusión no mayor de 50mg/
min (ejemplo, paciente de 70kg: 5,5 amp de COMPLICACIONES
250mg/100 mL SSN para pasar IV en 30 min).
Se debe vigilar el ECG por el riesgo de arritmias. Se deben recordar y manejar las frecuentes
complicaciones secundarias al estado convul-
Si las convulsiones ceden, se inician anticon- sivo: broncoaspiración, edema pulmonar neu-
vulsivantes por vía oral lo más pronto posible, rogénico, hipertermia, insuficiencia renal por
utilizando dosis altas para lograr niveles tera- rabdomiolisis (se previene al forzar la diure-
péuticos en corto tiempo. sis y alcalinizar orina), hipotensión, depresión
respiratoria y sedación por uso de los anticon-
Si las convulsiones continúan, se puede pro- vulsivantes.
ceder así:

• Utilizar una segunda dosis de fenitoína 5- CONSIDERACIONES ESPECIALES


10mg/kg IV.
• Utilizar ácido valproico (Valcote® IV) en MANEJO PRE-HOSPITALARIO
dosis de carga IV de 15-45mg. Se prefiere
utilizar inicialmente dosis bajas y usar do- En años recientes se han conducido estudios
sis adicionales según necesidad (ejemplo, que validan el uso de benzodiacepinas IV (dia-
paciente de 70 kg: 2 amp de 500 mg dilui- zepam-lorazepam) por paramédicos en el am-
das en 100 ml de solución salina normal, biente prehospitalario para el manejo de cri-
pasar en 15min). sis convulsivas, mientras el paciente es tras-
• Adicionar al manejo fenobarbital 20 mg/kg portado al servicio de urgencias.
IV (amp 200 mg: 7 amp diluidas para 20-
30 min). Se puede repetir 5min después a Los beneficios demostrados son el control de
dosis de 10 mg/kg IV (paciente de 70 kg: 3 las convulsiones en 50-60% de los casos, con
amp para 10min). disminución de la necesidad de manejo en UCI
y menor incidencia de complicaciones respi-
Si el paciente continúa con crisis, se conside- ratorias.
ra en estado convulsivo refractario y debe ser
trasladado a la UCI para sedación con barbi- Se postula como elección el lorazepam, pero
túricos, relajantes musculares, ventilación en nuestro medio se tiene como limitación la
mecánica, manejo con lorazepam intravenoso, carencia de la presentación IV.
con vasoactivos y monitorización con EEG.
Los fármacos y las dosis utilizadas son: Adicionalmente, ante la dificultad de obtención
de una línea venosa, se están validando estudios
• Midazolam: 0,2 mg/kg bolo IV lento. Con- de manejo con diazepam gel intrarrectal, demos-
tinuar 0,75-1 mcg/kg/ min. trando que la rápida administración por esta vía
• Propofol: 1-2 mg / kg IV. Continuar 2-10 mg/ reduce el tiempo total de la convulsión, el daño
kg/hora. neuronal y la incidencia de complicaciones.

1217
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PROFILAXIS ANTICONVULSIVANTE del TCE y mantenido con dosis diarias de 5


DEL TCE SEVERO mg/kg hasta el día 7 post-TCE, sea oral o IV
según la condición del paciente lo permita.
El TCE se define como severo (cerrado o pe-
netrante) si hay pérdida del conocimiento con Para prevenir convulsiones posteriores al día
amnesia mayor de 12 horas, hematoma intra- 7, ningún tratamiento profiláctico ha demostra-
craneal, fractura de cráneo deprimida o con- do efectividad y no debe utilizarse de rutina.
tusión cerebral evidenciada por escanografía.

Las convulsiones post TCE se clasifican como LECTURAS RECOMENDADAS


tempranas o tardías, según ocurran antes o
después de 7 días del TCE. Esta división es 1. Alldredge BK, Gelb AM, Isaacs SM, et al. A
ampliamente usada pero arbitraria. La ocu- Comparison of lorazepam,diazepam, and placebo
for the treatment of out-of-hospital status
rrencia de convulsiones antes del día 7 no ne-
epilepticus. N Engl J Med 2001; 345:631-637.
cesariamente implica un proceso epileptogé- 2. Chapman MG, Smith M, Hirsch MP. Review article:
nico subyacente, pero el tiempo exacto en que Status Epilepticus. Anaesthesia 2001; 56:648-659.
la ocurrencia de una convulsión post TCE pre- 3. Fitzgerald BJ, Okos AJ, Miller JW. Treatment of
dice la aparición de un síndrome convulsivo out-of-hospital status epilepticus with diazepam
no se ha establecido con exactitud. rectal gel. Seizure 2003; 12:52-55.
4. Lowenstein DH, Alldredge BK. Current Concepts:
Status Epilepticus. N Eng J Med 1998; 338:970-
Recomendaciones: para disminuir el riesgo
976.
de que ocurran convulsiones antes del día 7, 5. Parviainen I, Uusaro A, Kalviainen R, et al. High-
se debe utilizar tratamiento profiláctico con dose thiopental in the treatment of refractory sta-
fenitoína, con dosis de carga de 20 mg/kg IV tus epilepticus in an intensive care unit. Neurology
iniciada tan pronto como sea posible después 2002; 59:1249-1251.

1218
CAPÍTULO VIII: ENFERMEDAD CEREBRO VASCULAR

CAPÍTULO VIII

Enfermedad cerebro vascular

Jorge Luis Orozco Vélez, MD


Sección de Neurología
Fundación Clínica Valle del Lili
Cali

E nfermedad cerebro vascular (ECV) es el


nombre dado al conjunto de alteraciones
focales o difusas de la función neurológica de
ETIOLOGÍA
El 80% de los casos de ECV son de tipo isqué-
origen eminentemente vascular (hemorrágico mico, aterotrombótico de grandes, medianos
o isquémico), sin consideración específica de o pequeños vasos (lacunar), embólico a par-
tiempo, etiología o localización. El espectro tir del corazón o de arterias extra o intracranea-
de la enfermedad es muy amplio y heterogé- les (carótidas o vertebrales) y hemodinámico,
neo, razón por la cual hay que tener esque- cuando factores que comprometen la perfu-
mas de diagnóstico y manejo bien definidos sión local o sistémica generan isquemia
para cada subgrupo y cada momento de la cerebral.
enfermedad.
El 20% restante de la ECV es de tipo hemo-
rrágico, ya sea por hemorragia subaracnoidea
EPIDEMIOLOGÍA (HSA) o hemorragia intracerebral espontánea
(HIC). El principal factor de riesgo para HIC,
La ECV es la tercera causa de mortalidad, que habitualmente compromete los ganglios
después de las enfermedades del corazón y básales (putamen y tálamo), es la hipertensión
el cáncer y es la principal causa de incapaci- arterial no controlada; otras causas menos fre-
dad o pérdida funcional de origen neurológico. cuentes son las malformaciones vasculares,
Es esta última razón la que determina el im- el uso de algunas drogas, enfermedades he-
pacto económico y social, sobre todo cuando matológicas y tumores cerebrales.
se presenta en personas funcional y laboral-
mente activas. Los principales factores de riesgo vascular pa-
ra la ECV isquémica son la hipertensión arte-
La prevalencia de la ECV en Colombia, se- rial, dislipidemia, diabetes, enfermedad cardia-
gún diversos estudios, oscila entre 300 y 559 ca de tipo isquémico o con riesgo de embolia,
casos por 100.000 habitantes, desconocién- como la fibrilación auricular o prótesis valvula-
dose en gran parte el comportamiento espe- res. Otros son la presencia de ateromatosis
cífico de la enfermedad por subgrupos en carotídea o vertebrobasilar significativa, el ha-
nuestra población. ber presentado un episodio de isquemia ce-
rebral transitoria o accidente cerebrovascular
(ACV), tabaquismo, obesidad, sedentarismo,
raza afroamericana y edad mayor de 60 años.

1219
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Son de enorme importancia el control y trata- de Horner, déficit motor y/o sensitivo cruza-
miento adecuados de la hipertensión arterial, do, alteración del estado de conciencia, cefa-
dislipidemia, diabetes mellitus y de la enfer- lea, náusea, vómito y vértigo.
medad carotídea severa sintomática.

AYUDAS DIAGNÓSTICAS
DIAGNÓSTICO
Al ingreso del paciente a la unidad de urgen-
En el servicio de urgencias el diagnóstico cias deberá hacerse énfasis en la rapidez y
clínico de la ECV de presentación aguda eficacia en la toma de estudios radiológicos,
(ACV) es esencial para el estudio y manejo electrocardiograma y pruebas de laboratorio.
subsiguiente. En el perfil clínico hay que con- Cuando el paciente va camino a tomársele la
siderar la semiología del territorio vascular TAC cerebral simple, al menos ya se deben
comprometido (carotídeo o vertebrobasilar), haber tomado muestras de sangre para hemo-
el tiempo de evolución, forma de instauración, grama, glicemia, electrolitos, creatinina y tiem-
enfermedades posiblemente relacionadas o pos de coagulación. Generalmente la escano-
causas precipitantes y el comportamiento de grafía se hace sin medio de contraste, excep-
los síntomas desde su instauración (progre- to cuando se quiera conocer algo adicional de
sión o mejoría). la anatomía arterial o venosa cerebral.

La aplicación actual a nivel mundial del proto- La escanografía computadorizada (TAC) es


colo de trombólisis intravenosa para el ata- el método más eficaz, rápido y de bajo costo
que cerebro vascular isquémico en las prime- para el estudio de un evento isquémico agu-
ras tres horas, hace énfasis en el análisis clí- do en el servicio de urgencias. Busca detec-
nico con la aplicación de escalas para la in- tar esencialmente hemorragia cerebral (tiene
clusión de los pacientes. sensibilidad de 100% para HIC y de 96% para
HAS), o la presencia de signos radiológicos
La semiología básica de los territorios neuro- tempranos que sugieran evento isquémico
vasculares puede resumirse así: extenso en evolución, que contraindique la
trombolisis. En etapas muy tempranas es fre-
Arteria cerebral media: hemiparesia y/o cuente que la escanografía sea normal, como
hemianestesia contralateral, afasia en hemis- también es posible encontrar anomalías en
ferio dominante, trastorno en orientación es- isquemias cerebrales transitorias.
pacial, desviación conjugada de la mirada y
alteración de la conciencia. La Resonancia magnética (RM) cerebral
supera a la escanografía, tanto en la sensibi-
Arteria cerebral anterior: paresia distal, lidad para detectar isquemia en la fase aguda,
apraxia ideomotora, afasia motora e inconti- como en la identificación de lesiones antiguas
nencia urinaria. de tipo lacunar, infartos del territorio vertebro-
basilar o hemorragias pequeñas. Permite
Arteria cerebral posterior: hemianopsia visualizar la circulación cerebral arterial y ve-
homónima, alexia (dominante). nosa, con lo cual se puede hacer una exce-
lente correlación clínico-radiológica y un diag-
Territorio vertebrobasilar: compromiso de nóstico diferencial más amplio y rápido.
pares craneales, nistagmus, ataxia, síndrome

1220
CAPÍTULO VIII: ENFERMEDAD CEREBRO VASCULAR

El ultrasonido de urgencia está indicado para desaturación en el oxímetro. Se indica la pro-


descartar fuentes cardioembólicas o disección tección de la vía aérea, principalmente en pa-
arterial, principalmente en individuos meno- cientes con deterioro del estado de conciencia;
res de 45 años con isquemia cerebral o en uso de oxígeno por cánula a 2 a 4 L/min para
mayores con antecedentes sugestivos de casos leves de hipoxemia y la intubación tem-
embolismo, como infarto de miocardio recien- prana en casos de hipoxemia severa de ori-
te, fibrilación auricular, cardiopatía dilatada o gen neurológico, o secundaria a condiciones
valvulopatía. De su resultado depende el ini- médicas que comprometan la oxigenación.
cio temprano de la anticoagulación.
MANTENER AL PACIENTE
Otros estudios recomendados son el ecocar- EN NORMOVOLEMIA
diograma transesofágico y el duplex carotídeo-
vertebral que contribuyen significativamente Usar solución salina isotónica al 0,9%. Tratar
en el estudio etiológico de subgrupos que se agresivamente la deshidratación.
benefician de terapia anticoagulante y no de
antiagregación plaquetaria. MANEJO DE LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL

Durante el episodio agudo de isquemia cere-


TRATAMIENTO bral hay una reacción de defensa sistémica
DEL ACV ISQUÉMICO que busca mejorar la perfusión en el lecho
comprometido, con aumento de la presión
El tratamiento del ACV isquémico agudo tie- arterial; por lo tanto la tolerancia a cifras tensio-
ne un objetivo fundamental, que es defender nales elevadas debe ser la norma y pocas ve-
la zona de penumbra isquémica. Las medidas ces se requiere de hipotensores. Cifras tensio-
esenciales de soporte vital, aplicadas desde nales de 220/120 mmHg o menores o presión
el ingreso del paciente a urgencias, están en- arterial (PA) media menor o igual a 130 mm
caminadas a detener el daño primario y a pre- Hg no se deben tratar farmacológicamente.
venir la cascada nociva de eventos químicos Estas cifras disminuyen progresivamente en
y metabólicos en la zona de lesión, que deter- la primera semana.
minan el daño secundario.
Las únicas excepciones para tratamiento far-
Un cambio mundial en la actitud médica frente macológico parenteral, fácilmente titulable con
al ACV en urgencias llevó a demostrar en los nitroprusiato a 0.5 ug/kg/min o labetalol en
últimos años la importancia de manejar de for- bolos IV de 10-20 mg cada 20 minutos, son
ma integral y multidisciplinaria a estos pacien- la presencia de disección aórtica, infarto de
tes, constituyendo las llamadas Unidades de miocardio, falla cardíaca, falla renal aguda,
“stroke” (apoplejía). Diversos estudios de- encefalopatía hipertensiva o que el paciente
muestran que reducen el riesgo de muerte sin se sitúe dentro de la ventana terapéutica para
incrementar la estancia hospitalaria. hacer trombólisis intravenosa.

ADMINISTRACIÓN DE OXÍGENO En estos casos el margen de tolerancia a la


hipertensión es menor, debiéndose conside-
No se recomienda de manera rutinaria, excep- rar manejo con labetalol o nitroprusiato si la
to en casos donde se demuestre por gases PA es igual o mayor de 185/110 mmHg. Si la
arteriales la presencia de hipoxemia o PA disminuye dentro del tiempo de tres horas

1221
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de haber iniciado el evento, puede aplicarse ANTIAGREGACIÓN EN LA FASE AGUDA


el trombolítico y, por supuesto, debe hacerse
un seguimiento estricto en el periodo post- Aspirina (ASA) oral, 160-325 mg en las prime-
trombólisis y tratarse agresivamente en caso ras 48 horas, produce disminución de la re-
que la PA se aumente. currencia temprana y de la mortalidad. No se
recomienda como terapia combinada en las
El uso de antihipertensivos vía sublingual (an- primeras 24 horas post-trombolisis. Aún no se
tagonistas de calcio o captopril) no se recomien- sabe de las ventajas de la terapia combinada
da, por la incapacidad de titular la respuesta de ASA con clopidogrel en la fase aguda del
hipotensiva; deberán usarse en casos excep- ACV, como sí se ha demostrado en lesiones
cionales, cuando no se disponga de la terapia cardíacas.
parenteral. En caso de presentarse hipotensión,
también debe manejarse agresivamente con TROMBOLISIS INTRAVENOSA CON ACTIVADOR
cristaloides y soporte vasoactivo, con el fin de TISULAR DEL PLASMINÓGENO RT-PA
mejorar la presión de perfusión cerebral.
La terapia trombolítica intravenosa aplicada
TRATAMIENTO DE LA HIPERTENSIÓN en las tres primeras horas de iniciado el evento
ENDOCRANEANA isquémico, demostró beneficiar el pronóstico
funcional de los pacientes. La reproducción
La hipertensión endocraneana por edema de los resultados benéficos solo se conserva
cerebral aparece generalmente en las prime- si se respeta estrictamente el protocolo con
ras 72 horas y se asocia con oclusión de tron- los criterios de inclusión y exclusión. Debidos
cos arteriales mayores. Las medidas genera- a que se requiere disponibilidad de recursos
les son restricción de líquidos y elevación de humanos, técnicos y logísticos, su aplicación
la cabecera de la cama 20 o 30 grados, aun- solo es posible en escasos centros de urgen-
que esta medida es controvertida. cias. El objetivo sería establecer centros de
referencia rápida ubicados estratégicamente
En casos severos, con empeoramiento clíni- dentro de la ciudad, para que puedan referir-
co, se recomienda la intubación orotraqueal se a ellos los pacientes dentro del tiempo y
para hiperventilar y reducir el PaCO 2 entre 5 y oportunidad requeridos.
10 mmHg, con lo cual se consigue disminuir
la presión intracraneana. ANGIOPLASTIA PERCUTÁNEA Y “STENT”
EN EL CUADRO AGUDO
El uso de furosemida 40 mg IV y/o manitol
0,25 a 0,5 mg/kg de peso en bolos IV cada 6 La experiencia es aún limitada pero, junto al
horas, sin pasar de 2 g/kg de peso, a pesar desarrollo tecnológico de estos dispositivos,
de su uso corriente, no tiene suficiente sopor- es posible que algunos casos de estenosis
te en la evidencia y, además, su eficacia está críticas sintomáticas de arterias de mediano
restringida a unas 24 horas. calibre, tanto del territorio carotídeo como
vertebro-basilar, sean susceptibles de mani-
La hemicraniectomia decompresiva en infartos pulación endovascular con excelentes resul-
hemisféricos derechos con herniación inmi- tados, como se ha demostrado en pequeñas
nente, se recomienda como medida salvadora series de pacientes.
en un paciente que, de otra forma, quedaría
con secuelas severas.

1222
CAPÍTULO VIII: ENFERMEDAD CEREBRO VASCULAR

ANTICOAGULACIÓN CON HEPARINA SOPORTE NUTRICIONAL Y ALTERACIONES


HIDROELECTROLÍTICAS
No hay evidencia que la heparina mejore el
pronóstico neurológico o prevenga la recurren- Los pacientes que, como resultado del tipo de
cia temprana del ACV isquémico aterotrom- lesión neurológica, tengan alteración del es-
bótico, e incluso ofrece un alto riesgo de san- tado de conciencia o disfunción deglutoria con
grado intracerebral. No se deben iniciar antico- riesgo de broncoaspiración, deben ser alimen-
agulantes en las primeras 24 horas siguien- tados por vía enteral mediante sonda gástrica,
tes a la aplicación de la trombólisis. transitoriamente o de manera definitiva en al-
gunos casos. Deberá mantenerse un adecua-
Aunque existe controversia acerca del papel do balance hidroelectrolítico, suministrando
de la heparina en la etapa aguda del ataque solución salina isotónica en volúmenes de
isquémico por el riesgo de hemorragia y be- acuerdo con el estado hemodinámico y
neficio potencial, hay algunas condiciones cardiovascular.
especiales en las cuales el beneficio puede
superar el riesgo, siempre y cuando se man-
tenga un control estricto de los tiempos de TRATAMIENTO
coagulación. Esas condiciones son la disec- DEL ACV HEMORRÁGICO
ción arterial carotídea o vertebro-basilar, la
trombosis de senos venosos cerebrales, em- El diagnóstico etiológico es determinante en
bolismo cardio o aortogénico con trombos el enfoque terapéutico de la hemorragia intra-
inestables de alto riesgo de recurrencia, con cerebral. Esta puede ser primaria, asociada o
o sin fibrilación auricular, y episodios recurren- no a hipertensión arterial, o secundaria a di-
tes de isquemia cerebral asociados a atero- ferentes causas como malformaciones vascu-
matosis intra o extracraneana. lares, drogas, discrasias sanguíneas y otras.

FIEBRE El diagnóstico clínico comprobado por neuro-


imágenes como TAC o RM cerebral, la edad
Debe manejarse eficazmente la fiebre y sus del paciente y los antecedentes médicos,
causas, debido a que están asociadas con orientan sobre la necesidad de realizar angio-
mayor morbimortalidad. Aún no hay recomen- grafía cerebral. En pacientes jóvenes sin cau-
dación específica para el uso de hipotermia sa establecida, normotensos y candidatos a
como protector en estos pacientes. manejo quirúrgico, se debe realizar dicha
angiografía.
HIPERGLICEMIA
El tratamiento quirúrgico es controvertido y de-
El incremento de la glicemia está claramente ben siempre tenerse en cuenta edad, tama-
asociado a mayor compromiso neurológico y ño, localización y etiología del hematoma. La
mayor mortalidad, al favorecer el daño tisular recomendación es que los pacientes NO can-
secundario. Esquemas para administrar insuli- didatos a cirugía sean aquellos con hemato-
na cristalina y un monitoreo estrecho de las mas menores de 10 mL, con déficit neuroló-
fluctuaciones de la glucemia se deben emplear gico mínimo, excepto la hemorragia cerebelo-
durante los primeros días del evento agudo. sa compresiva de tallo. Son candidatos a ci-
rugía los pacientes con hemorragia cerebral
por malformación vascular o estructural, que

1223
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sea de fácil abordaje y de buen pronóstico. ischemic stroke: A combined analysis of 40 000
También, las hemorragias cerebelosas mayo- randomized patients from the Chinese acute stroke
res de 3 mL que cursen con deterioro neuro- trial and the international stroke trial. On behalf of
the CAST and IST collaborative groups. Stroke
lógico o hidrocefalia y pacientes jóvenes con
2000; 31:1240-1249.
hemorragia lobar extensa que produzca de- 5. Claesson L, Gosman-Hedstrom G, Johannesson
terioro neurológico. M, et al. Resource utilization and costs of stroke
unit care integrated in a care continium: A 1-year
controlled, prospective, randomized study in
elderly patients: the Goteborg 70+ Stroke Study.
LECTURAS RECOMENDADAS Stroke 2000; 31:2569-2577.
6. Coull BM, Williams LS, Goldstein LB.
1. Albers GW, Clark WM, Madden KP, et al. Anticoagulants and antiplatelet agents in acute
ATLANTIS trial: results for patients treated within ischemic stroke. Stroke 2002; 33:1934–1942.
3 hours of stroke onset. Alteplase thrombolysis for 7. Mohr JP, Thompson JL, Lazar RM, Levin B, et al.
acute noninterventional therapy in ischemic stroke. A comparison of warfarin and aspirin for the
Stroke 2002; 33:493-496. prevention of recurrent ischemic stroke. N Engl J
2. Albers GW, Goldstein LB, Hall D, Lesko LM. Med 2001; 345:1444-1451.
Aptiganel hydrochloride in acute ischemic stroke: 8. Saavedra R, Gomez D, Prada A, et al. Factores
a randomized controlled trial. JAMA 2001; de riesgo en enfermedad cerebrovascular
286:2673-2682. isquemica en menores de 45 años. Rev Fac Med
3. Benavente O, Eliasziw M, Streifler JY, et al. 2001;49:89-99
Prognosis after transient monocular blindness 9. Saxena R, Lewis S, Berge E, et al. Risk of early
associated with carotid-artery stenosis. N Engl J death and recurrent stroke and effect of heparin
Med 2001; 345:1084-1090. in 3169 patients with acute ischemic stroke and
4. Chen ZM, Sandercock P, Pan HC, Counsell C et atrial fibrillation in the International Stroke Trial.
al. Indications for early aspirin use in acute Stroke 2001; 32:2333-2337.

1224
CAPÍTULO IX: COMA

CAPÍTULO IX

Coma

Jorge Mario Salcedo, MD, FACEP


Jefe, Departamento de Urgencias y Servicio de Trauma
Fundación Santa Fe de Bogotá

C oma es el más dramático de los desór-


denes de la conciencia. Cualquier proce-
so que progrese al coma, puede presentarse
ben mal las alteraciones, mezclando sus con-
ceptos. Ellos son: Nublamiento de la concien-
cia, Confusión, Delirium, Obnubilación o Letar-
inicialmente como alteración leve del estado gia, Estupor, Coma, Coma superficial, Coma
mental. El coma es causado por una gran va- profundo, Coma psicógeno, Mutismo aquiné-
riedad de desórdenes, desde problemas es- tico, “Locked-in syndrome”. A menudo se pre-
tructurales del sistema nervioso central hasta sentan confusiones con el uso de estos térmi-
enfermedades sistémicas difusas; en aproxi- nos, y la mejor estrategia para evitarlos es de-
madamente 85% de los casos es causado por terminar si el paciente está alerta, despierto o
disfunción metabólica o sistémica y en 15% no responde y describir la respuesta ocular y
por lesiones estructurales. Es el cuadro clíni- motora a estímulos verbales y dolorosos.
co que causa más de 3% de las admisiones a
los servicios de urgencias. Se han desarrollado diversas escalas mate-
máticas con base en hallazgos neurológicos
para definir las alteraciones en el estado de
DEFINICIONES conciencia. La Escala de Coma de Glasgow
es el método más conocido. Un puntaje en la
Los pacientes con estados mentales alterados Escala de Glasgow de ocho o menos ha sido
se presentan en varias formas. Las definicio- usado como una definición alterna de coma;
nes específicas de los diversos niveles de con- sin embargo, esta definición es válida única-
ciencia son de ayuda para establecer el esta- mente cuando hay, como hallazgos asociados,
do inicial de base y describir los cambios en ausencia de apertura ocular y de respuesta a
la condición del paciente. El sueño, un estado órdenes. La escala tiene limitaciones signifi-
normal de disminución del estado de concien- cativas que incluyen reproducibilidad variable,
cia en el cual el paciente puede ser fácilmente medida poco confiable del nivel de concien-
despertado, es un hallazgo frecuente en los cia y excesiva importancia a las funciones del
servicios de urgencias; su característica esen- hemisferio izquierdo.
cial es la facilidad para retornar a un estado
de alerta, que lo diferencia de condiciones Se han desarrollado otros métodos, como la
patológicas. Escala de Coma de Liege o la Escala de Ni-
vel de Reacción Sueca, las cuales son poco
La conciencia es un concepto pobremente de- conocidas y tienen poca familiaridad y acep-
finido; se suelen adoptar nombres que descri- tación.

1225
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Escala de Coma de Glasgow

Apertura ocular Respuesta verbal Respuesta motora Puntaje


Ninguna ante dolor Ninguna ante dolor Ninguna ante dolor 1
Abre ante dolor Gemidos Descerebración (extensión) 2
Abre ante órdenes Incoherente Decorticación (flexión) 3
Abiertos, espontáneos Confuso, desorientado Retira ante dolor 4
Alerta, orientado Localiza ante dolor 5
Obedece órdenes 6

ETIOPATOGENIA coma; en contraste, lesiones unilaterales de


los hemisferios cerebrales no lo inducen.
La conciencia integra dos funciones basadas
en localizaciones neuroanatómicas diferentes, La cognición se altera cuando la corteza ce-
que son: rebral es grave o totalmente lesionada. Cuan-
do ambos hemisferios son afectados, el gra-
• Despertar depende de vías localizadas en do de alteración de la conciencia depende de
el cerebro medio. la magnitud y velocidad de ocurrencia de la
• Cognición depende de vías localizadas en lesión.
la corteza cerebral.
Las causas pueden ser difusas o focales.
El despertar ocurre por mecanismos fisiológi- Cuando la historia del paciente en coma no
cos no específicos. Está representado por el sugiere una causa específica obvia, la mitad
Sistema Reticular Activador (SRA) en el cere- a un tercio son difusas. Las lesiones focales
bro medio, el cual se extiende desde la forma- son más comunes en el territorio supratentorial
ción reticular hipotalámica hasta el tercio infe- que en el infratentorial. En presencia de una
rior del puente. El SRA actúa como la puerta lesión focal, una evaluación neurológica cui-
de entrada para estímulos que van a la corteza dadosa puede determinar la localización y
cerebral. La corteza no resulta únicamente determinar su manejo.
estimulada, sino que también provee un meca-
nismo de retroalimentación estimulando y mo-
dulando al SRA. Si esto no ocurre, se produ-
ce coma. Toxinas, anestésicos o compresio- ACERCAMIENTO DIAGNÓSTICO
nes del cerebro medio pueden alterarlo. Un
cerebro medio intacto es esencial, y aun lesio- El diagnóstico diferencial del estado mental
nes focales pequeñas del puente tienen la ca- alterado y del coma es vasto; sus causas son
pacidad de alterar el estado mental e inducir clasificadas en una variedad de categorías:

1226
CAPÍTULO IX: COMA

Disfunción Cerebral Difusa Lesión Focal Sistema Nervioso Central (SNC)


Daño neuronal causado por deprivacion de oxígeno, Hemorragia. infarto, tumor
glucosa o factores metabólicos
Toxinas endógenas del SNC Absceso
Toxinas exógenas del SNC
Desórdenes endocrinos
Anormalidades hidroelectroliticas
Alteración del medio ambiente y temperatura
Hipertensión intracraneana
Infiltración o inflamación del SNC
Desórdenes neuronales o gliales
Convulsión, estado postictal

En el servicio de urgencias las causas más cos, opiáceos, monóxido de carbono y otros)
frecuentes pueden ser recordadas por la se asocian con el coma.
nemotecnia AEIOUTIPS (tomado del inglés),
así:
EVALUACIÓN RÁPIDA
A. Alcohol, Drogas, Toxinas. Y ESTABILIZACIÓN
E. Endocrino, Exocrino.
I. Insulina. La atención inicial de todo paciente que ingre-
O. Oxigeno, opiáceos. sa al servicio de urgencias incluye la evalua-
U. Uremia. ción mediante anamnesis, examen físico, exá-
T. Trauma, temperatura. menes de laboratorio e imagenología, al tiem-
I. Infección. po que se esboza un tratamiento. En el paciente
P. Psiquiatría, porfiria. en coma, este orden resulta erróneo. El paso
S. Lesiones que ocupan espacio (space), inicial es un tratamiento de soporte inmediato,
shock, enfermedad cerebro vascular con oxígeno a alto flujo y estrecha observación.
(ECV). En el tratamiento inicial de emergencia, se des-
cribe como el “Cóctel Coma”, el cual se inicia
La evaluación inicial se debe orientar hacia la en la fase prehospitalaria para ser continuada
identificación y el tratamiento de las causas a su acceso al hospital. Se trata de una serie
reversibles y potencialmente fatales. Ejemplos de medidas encaminadas a controlar causas
de ellas son la hipoglucemia y la intoxicación potencialmente fatales; dichas medidas son:
por opiáceos; aún en ausencia de fiebre, debe
descartarse infección del sistema nervioso 1. Uso precoz de dextrosa al 25% o al 50%,
central. Las demoras en su diagnóstico incre- en dosis de 0,5-1,0 g/kg, orientado a pre-
mentan la morbimortalidad. Aunque la intoxi- venir las secuelas de neuroglucopenia. La
cación con etanol es causa común de coma, rápida recuperación del estado de concien-
es conveniente descartar intoxicación con me- cia confirma la hipoglucemia y puede ob-
tanol. Una gran variedad de drogas recreacio- viar la necesidad de manejo de la vía aé-
nales o suicidas (benzodiacepinas, barbitúri- rea y prolongar la evaluación diagnóstica.

1227
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Teóricamente se debe administrar previa- HALLAZGOS ASOCIADOS


mente tiamina, 50-100 mg (50 mg IM y 50
mg IV o 100 mg IV). Sin embargo, el con- Historia clínica. Aunque los datos de la his-
cepto de inducción del Síndrome de Werni- toria clínica no pueden ser suministrados por
cke-Korsakoff nunca ha sido confirmado ni el paciente, éstos constituyen un elemento cla-
validado plenamente; por lo tanto, la admi- ve en el manejo, y deben ser obtenidos en
nistración de dextrosa no debe ser retrasa- comunicación con familiares, amigos y el per-
da, aun si no se ha administrado la tiamina. sonal de la atención prehospitalaria.
3. El uso precoz de antagonistas de opiáceos
como naloxona, en dosis de 0,4 mg IV, o El comienzo abrupto del coma con o sin ante-
nalmefeno, puede obviar la necesidad de cedentes de cefalea, náusea o vómito, sugiere
intubación endotraqueal y reducir el riesgo hemorragia o isquemia del SNC. La progresión
de “reacciones por retiro” de opiáceos, así en horas o días sugiere otros desórdenes,
como de una respuesta violenta, lo cual tales como el coma hiperosmolar no cetósico,
justifica tratar a todos los pacientes con esta la hipercalcemia, una sepsis severa, etc. El
medida. conocimiento del estado previo del paciente
4. El uso de antagonistas de benzodiacepinas provee claves diagnósticas. Es así como un
como el flumazenil en dosis de 0,5 mg IV, estado previo de delirio sugiere intoxicación
no es recomendado como medida rutinaria, alcohólica, retiro de sedantes, psicosis tóxica,
particularmente en pacientes con ingesta encefalitis. Coma precedido por confusión sin
previa de antidepresivos tricíclicos, quienes delirio sugiere hipoglucemia, toxinas endóge-
están en mayor riesgo de sufrir convulsio- nas o sobredosis de drogas. Otros elementos
nes. Otro factor de riesgo que puede au- críticos en la historia clínica incluyen el uso
mentar dicho evento es el uso crónico de de drogas, antecedente de trauma, fiebre,
benzodiacepinas. Si se está plenamente cefalea y episodios similares previos.
seguro de la ausencia de algún factor de
riesgo y durante la evaluación inicial se La historia médica, especialmente los antece-
sospecha sobredosis con benzodiacepi- dentes de diabetes mellitus, convulsiones, en-
nas, se puede usar flumazenil. fermedad cerebrovascular, enfermedad hepá-
tica y falla renal, deben ser registrados. El uso
Si la causa potencial de coma no puede ser de brazaletes de identificación personal (dia-
determinada, el manejo inmediato de la vía betes, convulsiones) es importante para faci-
aérea es primordial, y se debe usar secuen- litar la evaluación y el tratamiento iniciales.
cia de intubación rápida (SIR), previniendo
aspiración, para asegurar adecuada ventila- Examen físico. Su objetivo inicial es diferen-
ción y oxigenación. Todo paciente con Escala ciar entre una lesión estructural focal del SNC
de Coma Glasgow de ocho o menos, que se y un proceso metabólico global. La evaluación
presume tenga elevación de la presión intra- se inicia con el ABC (vía aérea, ventilación,
craneana, requiere una técnica apropiada de circulación), seguido por el registro de los sig-
SIR. A menos que sea excluido el trauma, se nos vitales, incluyendo temperatura. Los sig-
debe hacer la inmovilización de la columna nos indicativos de trauma deben ser descar-
cervical manual en línea. tados en forma rápida. Es necesario mante-
ner inmovilizada la columna cervical hasta una
evaluación radiológica y clínica más profun-
da; el paciente debe ser completamente ex-

1228
CAPÍTULO IX: COMA

puesto, y especial importancia debe darse al usualmente son expresión de daño axonal
examen de la cara y el cráneo. cortical difuso.
5. Movimientos oculocefálicos, denominados
Un examen neurológico localizado debe seguir “ojos de muñeca”, requieren la integridad
al examen físico completo, con especial aten- del área del cerebro medio que compren-
ción a la postura, movimiento y respiración. de el III y el VI pares y el fascículo longitu-
Las evaluaciones sensoriales y motoras de- dinal medio.
talladas no son necesarias inicialmente. La
presencia o ausencia de signos neurológicos Se utilizan estímulos calóricos del aparato ves-
de lateralización reduce las posibilidades en tibular para evaluar la función del puente. La
el diagnóstico diferencial. técnica más usada es la irrigación del canal
auditivo con 10 mL de agua helada, mante-
No todos los examinadores tienen el conoci- niendo la cabeza elevada a 30°. La respuesta
miento de los tipos de alteración de la concien- normal es una lenta desviación ocular hacia
cia; por lo tanto, es mejor describir la respuesta el lado del estímulo (mediada por el cerebro
a la voz, al tacto y al estímulo nocivo. Se ha medio), seguida por una rápida desviación
descrito una variedad de estímulos; el mejor hacia el centro (mediada por la corteza); la
es la estimulación de la nasofaringe con un ausencia de nistagmo indica daño de los he-
copo de algodón, el cual no es dañino ni dolo- misferios; ninguna respuesta implica disfun-
roso, no deja marcas y es fácilmente repro- ción póntica.
ducible.

Es de primordial relevancia la evaluación de PRUEBAS AUXILIARES


los movimientos oculares, que proveen infor-
mación del estado de una gran parte del ce- 1. Glucemia: si es posible debe ser medida
rebro medio y del SRA. Los movimientos extra- antes de iniciar empíricamente la infusión
oculares son la expresión de las interacciones de dextrosa. Una pronta mejoría luego de
entre la corteza y el cerebro medio. Se pue- esta medida elimina la necesidad de estu-
den describir varios movimientos oculares: dios posteriores.
2. Electrolitos, pruebas de función renal: es-
1. Mirada desconjugada horizontalmente: se tán indicadas en pacientes con acidosis,
observa en estados de sedación por alco- desórdenes electrolíticos (principalmente
hol o medicamentos sedantes. hipernatremia e hiponatremia) y en uremia.
2. Mirada desconjugada verticalmente: gene- 3. Oximetría, gases arteriales: la primera es
ralmente refleja lesión cerebelar o del una medida rápida para detectar hipoxe-
puente. mia; la medición de gases ayuda a clasifi-
3. Movimientos oculares espontáneos cícli- car los estados de desequilibrio ácido-base
cos, cortos, rápidos, caudales con retorno y la intoxicación por carboxihemoglobina.
a la posición inicial, denominados “ocular 4. Hemograma: es de poca utilidad, es insen-
bobbing”, denotan daño póntico bilateral, sible y poco específico para detectar in-
daño metabólico o compresión del cerebro fección. El hallazgo de leucopenia puede
medio. sugerir infección fulminante asociada con
4. Movimientos oculares lentos, cíclicos, ho- inmunosupresion. La presencia de trombo-
rizontales, seguidos por retorno a la posi- citopenia debe hacer pensar en hemorra-
ción media, denominados “ocular dipping”, gia intracraneana o sepsis. Hasta que la

1229
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

trombocitopenia no sea corregida, no se sa metabólica no puede ser descartada en


puede realizarse punción lumbar. la evaluación inicial. La TC de urgencia en
5. Uroanalisis: el hallazgo de glucosa implica el paciente en coma se hace sin medio de
hiperglucemia. Leucocituria, nitritos o bac- contraste, orientada a determinar hemorra-
terias, sugieren sepsis de origen urinario, gia intracraneana. Cuando es normal, se
que es una causa común de coma en an-
recomienda, según las hipótesis diagnósti-
cianos). Cristales de oxalato y componen-
cas, realizar Resonancia Nuclear Magnéti-
tes fluorescentes son indicadores de intoxi-
cación por etilenglicol. ca (RNM).
6. Cuando se han descartado las causas co- 8. El EEG, que raramente se realiza en urgen-
munes de coma, es conveniente realizar cias, puede facilitar el diagnóstico de un
estudios toxicológicos en sangre y en orina. estado epiléptico atípico y ayuda a distin-
7. Tomografía computadorizada (TC) de crá- guir entre los movimientos mioclónicos y
neo: debe ser ordenada cuando una cau- los convulsivos.

ALGORITMO DIAGNÓSTICO

Respuesta al NO Pupilas reactivas NO


TC
Cóctel-Coma No focalización

SI SI

Hipoglucemia Antibióticos SI Patología


Opiáceos Tóxicos Intracraneana
Electrolitos, Ca
Uroanálisis
Función hepática
SI

Hospitalizar SI Causa NO
Tratamiento
Tratamiento determinada

NO

TC: Tomografía computadorizada. TC, PL


PL: Punción lumbar
Ca: Calcio

1230
CAPÍTULO IX: COMA

MANEJO EMPÍRICO EGRESO


Después del manejo inicial con dextrosa y Los pacientes con causas reversibles de co-
naloxona, el tratamiento adicional depende de ma, como hipoglucemia, sobredosis de heroí-
la causa sospechada. na o intoxicación con etanol, pueden ser da-
dos de alta desde urgencias, después de un
1. Aunque la encefalopatía de Wernicke es periodo corto de observación y ya en estado
rara, está indicada la administración de tia- de alerta sostenido; sin embargo, si la dura-
mina 100 mg IV o 50 mg IV, combinada ción de la acción del tóxico (metadona o hipo-
con 50 mg IM en pacientes malnutridos o glucemiantes orales) excede a la del antído-
con alcoholismo crónico. to, es prudente la hospítalización. Todos los
pacientes con otras causas de coma deben
2. El uso empírico de flumazenil está indicado ser hospitalizados.
cuando se descartan las condiciones men-
cionadas anteriormente. Se administran 0,3
mg en el primer minuto, seguidos por 0,2 a ERRORES COMUNES
0,3 mg cada minuto hasta obtener respues-
ta o hasta un total máximo de 1,0 mg. 1. Esperar los resultados de laboratorio cuan-
do los hallazgos del examen físico indican
3. El uso empírico de fisostigmina para tratar claramente un proceso focal que requiere
la intoxicación con anticolinérgicos, no está intervención quirúrgica inmediata.
indicado. 2. La evaluación diagnóstica y el manejo
inicial deben hacerse en forma simultánea.
4. La administración de tiroxina está indicada La espera de resultados puede llevar a la
en pacientes en coma con hallazgos con- muerte del paciente.
sistentes con mixedema, tales como cam- 3. Falla en tratar las causas comunes prime-
bios en la piel, hipotermia, bradicardia, re- ro. El control de la vía aérea, la administra-
flejos pseudomiotonicos (fase de relajación ción de oxígeno, el soporte cardiovascular,
lenta). La asociación con esteroides está la administración de glucosa, son cuidados
descrita por presentarse la combinación apropiados iniciales en el paciente en es-
con insuficiencia adrenal. tado crítico.
4. No reevaluar continuamente los cambios
5. Los antibióticos deben ser considerados en en el nivel de atención, los signos vitales,
todos los pacientes en coma de causa des- los patrones del habla.
conocida, particularmente si se presentan
con fiebre.
LECTURAS RECOMENDADAS
6. Si se sospecha sobredosis de tóxicos o fár-
macos, se inicia el manejo básico del pa-
1. Derlet R, Alberston T. Flumazenil induces seizures
ciente intoxicado. La administración de 1 g and death in mixed cocaine-diazepam intoxica-
de carbón activado a través de sonda tions. Ann Emerg Med1994; 23:494-498.
nasogástrica con protección de la vía aé- 2. Gueye P, Hoffman J, Pierre T et al. Empiric use of
rea es beneficioso. El lavado gástrico no flumazenil in comatose patients: Limited applica-
debe hacerse después de una hora de la bility of criteria to define low risk. Ann Emerg Med.
ingesta del tóxico. 1996; 27:730-735.

1231
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

3. Hamel M, Russell P, Teno J, et al. Cost effective- 7. Osorio I, Arafah B, Mayor C, et al. Plasma glucose
ness of aggressive care for patients with nontrau- alone does not predict neurologic dysfunction in
matic coma. Crit Care Med 2002; 30:1191-1196. hypoglycemic nondiabetic subjects. Ann Emerg
4. Hostetler M, Arnold G, Mooney R, et al. Hipoke- Med 1999; 33:291-298.
totioc hypoglycemic coma in 21-month-old child. 8. Roth B, Woo O. Early metabolic acidosis and coma
Ann Emerg Med 1999; 34:394-398. after acetaminophen ingestion. Ann Emerg Med
5. Ikeda M, Matsunaga T, Irabu N, et al. Using vital 1999; 33:452-456.
signs to diagnose impared consciousness: cross 9. Walls R, Marx J, Hockerberger R. Coma and
sectional observational study. BMJ 2002; 325:1-5. depressed level of conciousness. En: Rosen’s
6. Kaplan J, Marx J, Calabro J et al. Double-blind, ran- Emergency Medicine. Concepts and Clinical
domized study of nalmefene and naloxone in emer- Practice. Editado por JA Marx, RS Hockberger, RM
gency department patients with suspected narcotic Walls. Mosby. St Louis, 2002.
overdose. Ann Emerg Med 1999; 34:42-50.

1232
CAPÍTULO I: INTOXICACIONES AGUDAS. MANEJO BÁSICO

CAPÍTULO I

Intoxicaciones agudas. Manejo básico

Maria Clara Pinzón Iregui, MD


Departamento de Medicina Interna
Jefe Sección de Toxicología
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L as intoxicaciones accidentales, intencio-


nales y las sobredosis de drogas consti-
tuyen un grupo importante de enfermedades
za 2%. Cuatro por ciento de las admisiones
hospitalarias por toxicología requieren hos-
pitalización. Las exposiciones a tóxicos al-
con alta morbilidad, mortalidad y costos en canzan una proporción de 5-10% de todas
salud. Se estima que existen anualmente en las visitas hospitalarias y más de 5% re-
Estados Unidos entre 2- 5 millones de intoxica- quieren ingreso a una Unidad de Cuidado
ciones y sobredosis de drogas. Intensivo.

Aunque al principio el paciente intoxicado no Los venenos mas frecuentemente implicados


luzca enfermo, TODOS los pacientes intoxica- son:
dos deben ser tratados como si tuvieran una 1. Sustancias limpiadoras (10%).
enfermedad potencialmente mortal, hasta que 2. Analgésicos (10%).
el diagnóstico específico y su evolución de- 3. Cosméticos (9%).
muestren lo contrario. 4. Plantas (5%).

Por la complejidad de síntomas y signos, junto Los venenos que producen mayor mortalidad
con los exámenes diagnósticos y tipos de trata- en orden son:
mientos, en esta revisión se presentarán secuen- 1. Monóxido de Carbono.
cialmente los aspectos a tener en cuenta y los 2. Analgésicos.
pasos a seguir, pero, en la práctica todo debe 3. Antidepresivos.
hacerse simultáneamente (ej. Monitorización, 4. Drogas ilícitas.
manejo de la vía aérea, asegurar vena de buen 5. Drogas para uso cardiovascular.
calibre, administración de antídoto y lavado gás- 6. Alcoholes.
trico), por un personal entrenado para este fin.

CONSIDERACIONES GENERALES
EPIDEMIOLOGÍA
Los médicos que deben manejar intoxicacio-
• Aunque la mortalidad global de las intoxi- nes deben contar con una técnica sistemática
caciones solo alcanza 0,3%, la rata de mor- y consistente para evaluar al paciente. Esta
talidad en pacientes hospitalizados alcan- evaluación incluye tratar de reconocer:

1235
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

1. Sí es una intoxicación. HISTORIA CLÍNICA


2. Tóxico involucrado.
3. Manejo de la severidad. La historia clínica que en la mayoría de las
4. Predecir la toxicidad. enfermedades es fundamental para el diag-
nóstico y el tratamiento, en el caso de las into-
El manejo se dirige a: xicaciones puede:
1. Asegurar al paciente desde el punto de vis-
ta vital. • No obtenerse: pacientes inconscientes o
2. Prevenir la absorción del tóxico. pacientes que no quieren colaborar.
3. Administrar antídotos si es posible y • Ser incompleta o no confiable: pacientes
4. Aumentar la eliminación del tóxico. con intoxicación voluntaria suelen no infor-
mar realmente que o cuanto han ingerido.
Incluso las familias o acompañantes en
FASES DE LAS INTOXICACIONES ocasiones no aportan estos datos a pesar
de ser fundamentales por que ignoran lo
1. Fase preclínica: se extiende desde la ex- que sucedió o por temor o vergüenza.
posición al tóxico hasta el inicio de los sig- • Preguntar: QUÉ, CUÁNDO y CUÁNTO.
nos y síntomas. El manejo en esta fase es
guiado por la historia clínica y su objetivo EXAMEN FÍSICO
es reducir o prevenir la toxicidad esperada.
A continuación se presentarán secuencialmen-
2. Fase tóxica: comprende el período desde te los pasos en la evaluación y tratamiento de
el inicio de los síntomas hasta el pico de las alteraciones del examen físico del pacien-
manifestaciones clínicas y de laboratorio te intoxicado.
de toxicidad. Los objetivos del manejo en
esta fase son disminuir la duración de la VÍA AÉREA
toxicidad y la gravedad de ésta. Las priori-
dades de manejo son estabilizar al paciente El factor que más frecuentemente contribuye
y administrar antídotos si están indicados. a la muerte de un paciente con intoxicación
es la pérdida de los reflejos protectores de la
3. Fase de resolución: va desde el pico de vía aérea, que conducen a obstrucción, aspi-
toxicidad hasta la recuperación. El manejo ración gástrica o paro respiratorio. Todos los
es guiado por el estado clínico y el mayor pacientes intoxicados potencialmente pueden
objetivo es reducir la duración de la sufrir compromiso de la vía aérea.
toxicidad.
• Pacientes despiertos que hablan y con re-
flejos intactos deben ser evaluados perió-
DIAGNÓSTICO dicamente, pues algunos tóxicos pueden
DE LA INTOXICACIÓN producir deterioro rápido y muerte.
• Pacientes somnolientos, estuporosos o
Se hace a través de la historia clínica, el exa- comatosos: investigar si pueden despertar-
men físico, los laboratorios y las pruebas se al estímulo verbal, investigar reflejo nau-
toxicológicas. seoso o de tos. Si no están presentes pro-
ceder a intubar y dar ventilación asistida.

1236
CAPÍTULO I: INTOXICACIONES AGUDAS. MANEJO BÁSICO

VENTILACIÓN

Junto con los problemas de la vía aérea, las 1. Falla ventilatoria


dificultades para la ventilación son la mayor 2. Hipoxia
causa de morbi-mortalidad en pacientes intoxi- 3. Broncoespasmo
cados. Puede presentarse:

TABLA 1. DROGAS Y TOXINAS QUE PUEDEN CAUSAR FALLA VENTILATORIA

Parálisis muscular Depresión del centro respiratorio


Toxina botulínica Barbitúricos
Bloquadores neuromusculares Clonidina
Organofosforados y carbamatos Etanol y alcoholes
Mordeduras de serpientes Opioides
Estricnina Sedantes e hipnóticos
Tétanos Antidepresivos triciclitos

TABLA 2. DROGAS Y TOXINAS QUE PUEDEN CAUSAR HIPOXIA

Gases inertes Edema pulmonar no cardiogénico


CO2 Aspiración de contenido gástrico
Metano y propano Aspiración de hidrocarburos
Nitrógeno Gases irritantes
Edema pulmonar cardiogénico Cocaína
β-bloqueadores Etilenglicol
Antiarrítmicos Vapores de mercurio
Antidepresivos tricíclicos Dióxido de carbono
Calcioantagonistas Opiáceos
Hipoxia celular Paraquat
Monóxido de carbono Salicilatos
Cianuro Sedantes e hipnóticos
Metahemoglobina Inhalación de humo

TABLA 3. DROGAS Y TOXINAS QUE CAUSAN BRONCOESPASMO

β-bloqueadores
Gases irritantes (Cloro)
Aspiración de hidrocarburos
Isocianatos
Anti colinesterásicos
Inhalación de gas

1237
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CIRCULACIÓN El diagnóstico diferencial incluye:


• Trauma craneano y ECV.
• Verificar pulso y tensión arterial: con esto • Niveles anormales de glucosa, sodio y otros
se determina si se deben iniciar maniobras electrolitos.
de Resucitación Cardio Cerebro Pulmonar, • Hipoxia.
según las guías del ACLS (Advanced • Hipotiroidismo.
Cardiac Life Support) • Falla renal o hepática.
• Iniciar monitoreo electrocardiográfico y de • Encefalitis o meningitis.
signos vitales continuo: las arritmias pue-
den complicar el curso de cualquier intoxi- El manejo del estado neurológico incluye:
cación, y todos los pacientes con intoxica- 1. Mantener despejada la vía aérea y admi-
ción por drogas POTENCIALMENTE car- nistrar oxígeno y ventilación asistida.
diotóxicas deben ser monitorizados por lo 2. Dextrosa: debe administrarse glucosa ex-
menos seis horas hasta determinar la evo- cepto que la glucemia sea normal. La do-
lución de su cuadro. sis recomendada es 25 g, no importa la
• Asegurar acceso venoso: 1 o 2 venas ante- concentración, en bolo.
cubitales de buen calibre. Otras alternati- Tiamina: Se utiliza para evitar desencade-
vas posteriores son accesos centrales, nar la encefalopatía de Wernicke en pacien-
pero solo por personal calificado. tes alcohólicos con deficiencia de vitami-
• Tomar muestras para los diferentes estu- nas. Dosis: 100 mg IV o IM.
dios que se vayan a solicitar: tubos de he- Naloxona: todos los pacientes con depre-
matología, química sanguínea al menos sión respiratoria deben recibir naloxona en
dos, y de coagulación. También obtener dosis de 0,4-2 mg IV en bolo. Puede llegar
muestra de orina. a precipitar abstinencia, o crisis hipertensi-
• Iniciar infusión de LEV de acuerdo al caso vas cuando el opiáceo se administró en
• Si el paciente está en regulares condicio- conjunto con anfetaminas o cocaína.
nes, colocar sonda vesical para monitoria Flumazenil: 0,3-0,5 mg IV bolo si se sos-
de diuresis. pecha sobredosis de benzodiazepinas.
Normalizar temperatura corporal
ALTERACIÓN DEL ESTADO MENTAL 3. Realizar TAC de cráneo si se sospecha
trauma o ECV.
Coma y estupor 4. Si se sospecha meningitis o encefalitis, rea-
El deterioro del estado de conciencia conlle- lizar punción lumbar con estudio citoquí-
va a las complicaciones mas serias de las into- mico y microbiológico.
xicaciones. El coma puede ser resultado de:
HIPOTERMIA
• Depresión del sistema reticular activador.
• Como fenómeno post-ictal. Puede remedar o complicar una intoxicación.
• Trauma craneano, sangrado o isquemia. Generalmente es causada por exposición pro-
longada a temperaturas bajas, en pacientes
El coma va frecuentemente acompañado de con dificultades para la termorregulación. Las
depresión respiratoria, con riesgo de hipoxe- complicaciones asociadas con hipotermia es-
mia, hipercapnia y muerte. Otras condiciones tán dadas por la reducción de la tasa metabó-
que pueden complicar el coma son hipoten- lica, y el escaso flujo de sangre por la hipoten-
sión, hipotermia, hipertermia y rabdomiólisis. sión y la bradicardia secundarias.

1238
CAPÍTULO I: INTOXICACIONES AGUDAS. MANEJO BÁSICO

TABLA 4. CAUSAS DE COMA Y ESTUPOR

Depresores generales del SNC Hipoxia celular


Anticolinérgicos Monóxido de Carbono
Antihistamínicos Cianuro
Barbituratos Metahemoglobinemia
Benzodiazepinas
Carbamazepina

Otros o por mecanismos no claros


Etanol y otros alcoholes Bromuros
Fenotiazinas Disulfiram
Otros sedantes Hipoglicemiantes
Antidepresivos tricíclicos Litio
Acido Valproico Penciclidina
Fenilbutazona
Agentes simpaticolíticos Salicilatos
Clonidina, tetrahidrozolina
Opiáceos

TABLA 5. CAUSAS DE HIPOTERMIA

Barbitúricos Fenotiazinas
Etanol y otros alcoholes Sedantes e hipnóticos
Hipoglicemiantes Antidepresivos tricíclicos
Opiáceos Vasodilatadores

El diagnóstico diferencial incluye: pertermia, rigidez muscular, acidosis meta-


• Sepsis. bólica y confusión.
• Hipoglicemia. • Hipertermia maligna: desorden hereditario
• Hipotiroidismo. precipitado por el uso de algunos agentes
• Hipotermia por exposición ambiental. anestésicos.
• Síndrome serotoninérgico: pacientes que
HIPERTERMIA usan IMAOS (Inhibidores de la monoamino
oxidasa) o medicamentos relacionados con
Se considera a la temperatura mayor de 40°C, la serotonina como la meperidina, los inhibi-
que puede ser una consecuencia catastrófica dores de la recaptación de serotonina y
de las intoxicaciones. Aparece en las siguien- otros. Producen irritabilidad, mioclonias,
tes entidades: diaforesis, disautonomía, hipertermia. Sue-
le ocurrir en pacientes que combinan
• Síndrome neuroléptico maligno: en pacien- IMAOS con inhibidores de la recaptación
tes que reciben antipsicóticos, dado por hi- de serotonina.

1239
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Convulsiones. acidosis metabólica, hipertermia, rabdomiólisis


• Aumento de la rata metabólica. y daño cerebral permanente.
• Alteraciones en la disipación del calor.
El diagnóstico diferencial incluye:
Si no se trata, puede desencadenar hipoten- • Alteraciones metabólicas (hipoglicemia,
sión, rabdomiolisis, CID (Coagulación intra- hiponatremia, hipocalcemia, hipoxia).
vascular diseminada), falla renal aguda, inju- • Trauma craneano.
ria cerebral y muerte. • Epilepsia.
• Abstinencia de alcohol y sedantes.
El diagnóstico diferencial incluye: • Infecciones del sistema nervioso central.
• Abstinencia de alcohol en fase de Delirium
Tremens. AGITACIÓN, DELIRIUM O PSICOSIS
• Tirotoxicosis.
• Meningitis o encefalitis. Pueden ser producidos por una gran variedad
• Otras infecciones. de toxinas y drogas. Los cuadros desenca-
denados por tóxicos mantienen el sensorio
CONVULSIONES conservado con predomino de las alucinacio-
nes auditivas, mientras que en el delirium o
Son una causa importante de morbi-mortali- en la encefalopatía metabólica, es mas fre-
dad en intoxicaciones. Pueden producir como cuente la alteración del sensorio con confu-
complicaciones compromiso de la vía aérea, sión y desorientación, y las alucinaciones son
apnea, aspiración de contenido gástrico, visuales en la mayoría de los casos.

TABLA 6. DROGAS Y TOXINAS QUE PUEDEN CAUSAR HIPERTERMIA

Actividad muscular excesiva:


Amoxapina, anfetaminas, cocaína, litio, LSD, IMAOS, penciclidina, antidepresivos tricíclicos
Aumento de la rata metabólica:
Salicilatos, hormona tiroidea
Dificultad en la disipación de calor o en la termorregulación:
Amoxapina, anticolinérgicos, antihistamínicos, fenotiazinas, antidepresivos tricíclicos
Otras:
Hipertermia maligna, Síndrome neuroléptico maligno, síndrome serotoninérgico, abstinencia de alcohol y sedantes

TABLA 7. DROGAS Y TOXINAS QUE PUEDEN CAUSAR HIPERTERMIA

Adrenérgicos y simpaticomiméticos: anfetaminas y derivados, cafeína, cocaína, pencilidina, fenilpropanolamina,


teofilina.
Antidepresivos y antipsicóticos: Amoxapina, haloperidol, clozapina, olanzapina, fenotiazinas, antidepresivos
tricíclicos, venlafaxina y otros inhibidores de la recaptación de serotonina.
Otros: antihistamínicos,‘-bloqueadores,—ácido bórico, carbamazepina, hipoxia, colinérgicos, etilenglicol, isoniazida,
lidocaína, litio, meperidina, metanol, fenoles, piroxicam, salicilatos, estricnina, abstinencia de alcohol y sedantes.

1240
CAPÍTULO I: INTOXICACIONES AGUDAS. MANEJO BÁSICO

Se pueden acompañar de comportamientos PIEL


agresivos, aumento del movimiento, hiperter-
mia y rabdomiólisis. Pueden encontrarse los siguientes signos
dérmicos en las intoxicaciones:
El diagnóstico diferencial incluye:
• Alteraciones metabólicas (Hipoxia, hipogli- 1. Sudoración: organofosforados, carbamatos.
cemia, hiponatremia). 2. Piel roja y seca: anticolinérgicos, monóxido
• Abstinencia de alcohol y sedantes. de carbono, ácido bórico, quemaduras,
• Tirotoxicosis. disulfiram.
• Infecciones. 3. Palidez: simpaticomiméticos.
4. Cianosis: hipoxia, metahemoglobinemia.
OJOS
ABDOMEN
1. Miosis: clonidina, opiáceos, fenotiazinas,
ácido valproico, carbamatos, nicotina, orga- 1. Íleo: generalmente causado por factores
nofosforados, fisostigmina, infarto de puen- mecánicos, como trauma o perforación u
te, hemorragia subaracnoidea. obstrucción por cuerpos extraños y paque-
2. Midriasis: anfetaminas y derivados, cocaí- tes de drogas.
na, dopamina, LSD, nicotina, antihistamíni- 2. Distensión: secundario a isquemia por
cos, atropina, antidepresivos tricíclicos. vasoconstricción prolongada en casos de
3. Nistagmus: barbitúricos, etanol, carbama- vasoconstricción por simpaticomiméticos.
zepina, fenitoína y envenenamiento por 3. Vómito y diarrea: organofosforados y car-
escorpión. bamatos.
4. Disminución del peristaltismo: anticolinér-
NEUROPATÍA gicos.

Antineoplásicos, antiretrovirales, arsénico,


etanol, isoniazida, plomo, mercurio, organo-
fosforados, piridoxina, talio.

TABLA 8. DROGAS Y TOXINAS QUE PUEDEN CAUSAR HIPERTERMIA

CAUSAS DE AGITACIÓN Y DELIRIUM

Predominio confusión y delirium Predominio de psicosis


Amantadina Anfetaminas y derivados
Anticolinérgicos Cafeína
Antihistamínicos Cocaína
Monóxido de Carbono LSD
Bloqueadores H2 Marihuana
Metales pesados Mercurio
Lidocaína Penicilidina
Litio Esteroides
Salicilatos
Abstinencia de alcohol y sedantes

1241
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

SÍNDROMES TÓXICOS dad de hacerlos. De todas formas, de acuer-


do al tóxico involucrado y los síndromes tóxi-
Ahora que se revisaron los hallazgos del exa- cos se debe tratar de obtener muestras para:
men físico pueden dividirse en síndromes, con
los cuales se enfoca el tratamiento de una for- 1. Cuadro hemático.
ma mas específica y directa: 2. Glicemia.
3. Pruebas de función renal.
1. Síndrome alfa adrenérgico: hipertensión, 4. Pruebas de función hepática.
bradicardia y pupilas midriáticas (Fenipro- 5. Electrolitos.
panolamina, fenilefrina). 6. CPK, MD y Troponina.
2. Síndrome beta adrenérgico: hipotensión y 7. Uroanálisis.
taquicardia (Salbutamol, teofilina, cafeína). 8. Gases arteriales.
3. Síndrome alfa y beta adrenérgico mixto: hi- 9. Radiografía de tórax.
pertensión, taquicardia, midriasis, diafore- 10.Electrocardiograma.
sis y mucosas secas (cocaína y anfetami-
nas). Con respecto al estudio toxicológico específi-
4. Síndrome simpaticolítico: hipotensión y bra- co, primero debemos saber que utilidad tiene
dicardia, miosis, peristalsis disminuida (Clo- y como afecta el tratamiento el conocer la sus-
nidina, fenotiazinas, opiáceos). tancia:
5. Síndrome nicotínico colinérgico: taquicardia
inicial, luego bradicardia, fasciculaciones • ¿Cómo afecta el tratamiento el conocer el
seguidas de parálisis (Nicotina). tóxico involucrado?
6. Síndrome muscarínico colinérgico: bradi- • ¿Puede el resultado del tóxico afectar po-
cardia, miosis, sudoración, hiperperistaltis- sitivamente el tratamiento a pesar del tiem-
mo, broncorrea, salivación, diarrea e incon- po que se demore el resultado?
tinencia urinaria. No existen drogas con
efectos puramente muscarínicos. Existen pruebas específicas para unas 50
7. Síndrome colinérgico: mezcla de síndrome sustancias de los miles que pueden llegar a
nicotínico y muscarínico (organofosforados ser tóxicas. La intoxicación no depende del
y carbamatos y fisostigmina). tóxico sino de la dosis utilizada.
8. Síndrome anticolinérgico: taquicardia e
hipertensión moderada. Pupilas muy dila- ¿CUÁNDO ES ÚTIL MEDIR LOS TÓXICOS?
tadas. Piel seca, caliente y roja. Disminu-
ción del peristaltismo y retención urinaria. 1. Seguimiento cuantitativo de curva de toxi-
Mioclonias y movimientos coreoatetosicos, cidad: acetaminofén, salicilatos y antidepre-
delirium e hipertermia (atropina, escopola- sivos tricíclicos. Se miden en sangre.
mina, antihistamínicos y antidepresivos). 2. Efectos legales: violencia, trauma, suici-
dios, violaciones, abuso de niños. Es im-
portante tratar de obtenerlos puesto que los
EXÁMENES DE LABORATORIO resultados pueden modificar y afectar las
decisiones desde el punto de vista penal.
No se hace referencia a los hallazgos especí- 3. Abuso de sustancias psicoactivas: son fáci-
ficos de laboratorio. Estos se esperarán de les y económicos, y permiten tener eviden-
acuerdo al tóxico involucrado, el estado clíni- cia ante la posibilidad de negación de con-
co del paciente y obviamente, a la disponibili- sumo del paciente o sus allegados. Se

1242
CAPÍTULO I: INTOXICACIONES AGUDAS. MANEJO BÁSICO

necesita solo de pruebas cualitativas que dadosamente detrás de los oídos, debajo
se miden en orina. de las uñas y los pliegues cutáneos. Se
4. Cuando existe el diagnóstico de muerte puede usar shampoo o jabón si no está
cerebral es necesario hacer pruebas toxico- contraindicado (corrosivos).
lógicas de todas las sustancias sedantes
para descartar otra causa diferente del es- OJOS
tado neurológico.
La córnea es extremadamente sensible a los
¿CÓMO SE TOMAN LAS MUESTRAS? corrosivos y los hidrocarburos, que pueden
producir rápidamente daños irreversibles.
1. Comunicar al laboratorio la sospecha
diagnóstica. • Lavar los ojos con Solución Salina Normal
2. Obtener muestras de sangre y orina al in- ( 1 L) previa remoción de lentes de contac-
greso y guardarlos. Usarlos de acuerdo a to e instilación de gota de anestésico local.
las necesidades. Si es un corrosivo, medir pH de las lágri-
3. Las mejores muestras para obtener son mas después de la irrigación y continuar
orina y lavado gástrico. hasta que el pH lacrimal sea normal.
4. Consultar a un centro de referencia en • Después de terminar el lavado, valorar la
toxicología sobre dudas y posible remisión córnea, ocluir el ojo y remitir a valoración
del paciente o las muestras. por oftalmólogo.

INHALACIÓN
TRATAMIENTO
• Cuidar al personal de rescate de la exposi-
DESCONTAMINACIÓN ción a los mismos gases o vapores a los
que se expuso la víctima.
Es una prioridad. Cuando se inicia temprana- • Remover a la víctima del lugar e iniciar oxí-
mente, es la medida preventiva más efectiva geno suplementario. Proteger vía aérea y
para prevenir la absorción del tóxico y reducir empezar ventilación si es necesario.
la morbilidad y la mortalidad. Los métodos de • Observar si hay edema o indicio de quema-
descontaminación dependen de la vía de con- dura de la vía aérea. Si es positiva, vigilar
taminación y son: al paciente por la posibilidad de obstruc-
ción de la vía aérea.
PIEL • Vigilar signos y síntomas pulmonares y tra-
tar de acuerdo a éstos.
Los corrosivos producen rápidamente lesiones
serias y deben ser retirados inmediatamente. GASTROINTESTINAL
Además, muchas toxinas pueden ser absor-
bidas por la piel, aumentando el riesgo. Es la vía más común de exposición a tóxicos.
Existe controversia aún acerca del tiempo pru-
• Hay que proteger al personal de salud con dente para realizar medidas de descontami-
las medidas universales de bioseguridad. nación. Se presentan a continuación aquellas
• Remover ropa contaminada y lavar todas que en la evidencia han demostrado ser efec-
las areas expuestas con abundante canti- tivas y que no retrasan el proceso de descon-
dad de agua o solución salina. Lavar cui- taminación:

1243
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Vómito: es útil solo como medida para realizar Carbón activado: es un potente absorbente
en casa inmediatamente después de la expo- producto de la destilación de la pulpa de ma-
sición al tóxico. Luego, solo aumenta el ries- dera. Posee una larga superficie de absorción
go de aspiración de contenido gástrico. Con- y es efectivo para la mayoría de las toxinas.
traindicado en ingesta de corrosivos, hidrocar- Su uso es más efectivo que el lavado gástri-
buros aromáticos, pacientes somnolientos, co, y jamás se debe retrasar su inicio por ha-
estuporosos o comatosos o en pacientes con cer el lavado gástrico.
ingesta de sedantes de acción rápida.
Está contraindicado en casos de sospecha de
Lavado gástrico: su uso no debe ser rutina- obstrucción y perforación intestinal. Entre los
rio. Varios estudios han demostrado que con efectos adversos se tiene estreñimiento e
el lavado gástrico se disminuye la absorción impactación fecal, especialmente cuando se
en 26% cuando se hace a los 30 minutos de utilizan dosis repetidas.
ingesta, y solo 12% a los 60 minutos. Su utili-
dad hasta 2-4 horas sólo está demostrada en La técnica consiste en diluir 1g/kg de peso de
ingesta de sustancias con efectos anticolinér- carbón activado en agua o sorbitol, agitar y
gicos que retrasan el vaciamiento gástrico y administrar en volúmenes no mayores de 200c
salicilatos. La técnica que usa lavado gástri- por vía oral o por sonda, en dosis única o re-
co con adición de carbón activado antes del petidas (cada 2 horas 2 o 3 veces) de acuer-
lavado es más efectiva que el lavado gástrico do al tóxico.
solo. Es útil para diluir corrosivos en la cavi-
dad gástrica. Algunas sustancias no son absorbidas por el
carbón activado como álcalis, cianuro, alcoho-
Esta contraindicado en pacientes estuporosos les, etilenglicol, sales inorgánicas, hierro, litio,
y comatosos excepto si se ha asegurado la potasio.
vía aérea e intubado al paciente. Puede pre-
sentarse perforación esofágica o aspiración Catárticos: su uso se basa en aumentar el
de contenido gástrico como complicación. No tránsito intestinal y de esta forma disminuir la
está contraindicado en ingesta de corrosivos. absorción del tóxico y la posibilidad de obs-
trucción por carbón activado. En conjunto con
Si el paciente está despierto, colocar en decú- el carbón activado es más efectivo que el car-
bito lateral izquierdo. Esta posición disminu- bón solo. Se debe tratar de administrar una
ye la posibilidad del paso del tóxico al duode- sola dosis por los efectos indeseables (dolor,
no. Se utiliza sonda orogástrica con grosor 36- diarrea, deshidratación). Las dosis de
40F en adultos. Tubos mas delgados se usan catárticos son las siguientes:
en niños, o cuando el tóxico es líquido o cuan-
do va a instilar el carbón activado. Es nece- • Sorbitol 1 g/kg de peso.
sario retirar la mayor cantidad de contenido • Citrato de Magnesio 250 cc.
gástrico y tomar muestras en recipiente • Sulfato de Magnesio 250 mg/kg.
cerrado.
Repetir la mitad de la dosis si a las ocho ho-
El lavado se inicia con dosis de 200 cc por ras no se ha obtenido deposición.
vez y se continúa hasta completar 2-5 L u
obtener líquido claro.

1244
CAPÍTULO I: INTOXICACIONES AGUDAS. MANEJO BÁSICO

Irrigación intestinal: permite que las sustan- hidroelectrolíticos asociados (etanol,


cias tóxicas pasen por el tracto digestivo sin metanol, barbitúricos).
ser absorbidas. 3. Hemoperfusión: con el método de diálisis
se filtra la sangre a través de una membra-
Indicado en grandes ingestas de hierro, litio o na que contiene una sustancia de caracte-
drogas pobremente absorbidas por el carbón rísticas similares al carbón activado (resi-
activado, drogas con cubierta entérica de li- na Amberlite®). Se requiere anticoagula-
beración retardada o cuerpos extraños (pa- ción sistémica y puede producir trombocito-
quetes de drogas). penia.
4. Diálisis peritoneal.
Esta contraindicado en obstrucción intestinal, 5. Hemoperfusión.
ileo, pacientes en coma o con convulsiones. 6. Dosis repetidas de carbón activado.
Puede producir nausea, vómito y reducir la
efectividad del carbón activado. Se adminis-
tra una solución de polietilen glicol (Colyte®, DISPOSICIÓN DEL PACIENTE
Nulytely®, Golytely®) dos litros por hora has-
ta obtener diarrea clara. Después de la valoración inicial, el tratamien-
to y el período de observación, se debe tomar
AUMENTO DE LA ELIMINACIÓN la decisión de qué hacer ahora con el paciente.

Si se ha logrado una rápida disminución de la • Salida: pacientes que desarrollaron toxici-


absorción las medidas para aumento de la elimi- dad leve, con predicción de severidad leve,
nación son pensadas de acuerdo a la evolución que no tienen alteraciones en el examen
tóxica. Hay que evaluar las características de la físico ni en las pruebas de laboratorio. El
sustancia, puesto que si no son absorbibles por egreso se define después de seis horas de
el carbón activado van a hacer todos sus efec- observación.
tos tóxicos. Otros datos que hacen tomar la de- • Hospitalización: pacientes que desarrolla-
cisión es el volumen de distribución de la droga, ron toxicidad moderada o quienes por su
si se liga o no a proteínas y su clearance. historia clínica y el tóxico involucrado es-
tén en riesgo de complicaciones, requie-
MÉTODOS: ren observación cercana y control periódi-
co clínico y de laboratorio.
1. Manipulación de la orina: Se requiere que • Unidad de cuidado intermedio: pacientes
la ruta de eliminación del tóxico sea urina- que requieren monitoría continúa por toxi-
ria. Puede ser: cidad grave esperada.
• Forzar diuresis con líquidos para au- • Unidad de cuidado intensivo: pacientes con
mentar la rata de filtración glomerular. intoxicaciones severas, tóxicos de alta leta-
• “Trampa iónica”, manipulando el pH uri- lidad o fuerte ideación suicida. Los siguien-
nario se logra aumento de la excreción tes son factores predictivos de ingreso a UCI:
tubular del tóxico (en intoxicación por - PaCO2 mayor de 45 mmHg.
salicilatos se alcaliniza la orina, en an- - Necesidad de ventilación asistida.
fetaminas se acidifica). - Convulsiones.
2. Hemodiálisis: Las sustancias tóxicas son - Coma.
filtradas a través de las membranas semi- - Ritmo cardíaco no sinusal.
permeables. Permite corregir trastornos - Bloqueos AV de segundo o tecer grado.

1245
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

- Presión arterial sistólica menor de 85 7. Córdoba, D. Toxicología. 3a impresión. Impresio-


mmHg que requiere inotrópicos. nes Vieco e hijas, Medellín, 2001.
- Duración del complejo QRS mayor de 8. Curtis D, Klaassen J. Casarett and Doull’s Toxico-
logy: The Basic Science of Poisons. 6 Th Edition,
0,12 segundos. McGraw-Hill. New York, 2001.
• Valoración psiquiátrica: todos aquellos pa- 9. Greingor JL, Tosi JM, Ruhlmann S, Aussedat M.
cientes con ingesta intencional, indepen- Acute carbon monoxide intoxication during preg-
diente de la toxicidad, antes del egreso hos- nancy. One case report and review of the literature.
pitalario. Emerg Med J 2001; 18:399-401.
10. Guarderas JC. Is it food allergy? Differentiating
the causes of adverse reactions to food. Postgrad
LECTURAS RECOMENDADAS Med 2001; 109:125-127.
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guidelines on the treatment of methanol poisoning.
the classic treatment. Rev Esp Cardiol 2000;
J Toxicol Clin Toxicol 2002; 40:415-446.
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1246
CAPÍTULO II: AGENTES CÁUSTICOS Y CORROSIVOS

CAPÍTULO II

Agentes cáusticos y corrosivos

Jairo Téllez Mosquera, MD


Master en Toxicología
Profesor Asociado Universidad Nacional de Colombia

INTRODUCCIÓN

S e denominan agentes cáusticos aquellas


sustancias que producen quemadura en
el tejido con el cual se ponen en contacto.
Cuando se intenta neutralizar la presencia de
un ácido fuerte con bicarbonato o con otra ba-
se que produzca gas (CO2), se corre un alto
Agente corrosivo es aquel compuesto quími- riesgo de perforación de la mucosa lesionada,
co capaz de producir lesiones químicas direc- por el aumento de la presión intraluminal pro-
tas sobre los tejidos. ducida por el CO2. La mayor disponibilidad de
estas sustancias se encuentra en los produc-
Las sustancias químicas cáusticas y corrosi- tos de limpieza doméstica.
vas, comprende un gran grupo de elementos
y productos que son catalogados como ácidos,
como álcalis o como sustancias misceláneas, EPIDEMIOLOGÍA
que pueden presentarse en forma líquida, só-
lida y ocasionalmente como vapores, y que López y García, mencionan que en España
poseen un pH entre 0-3 (ácidos fuertes) y en- más de 36,5% de los niños que acuden a un
tre 11,5-14 (bases fuertes). Las sustancias con hospital por lesiones de quemaduras del tracto
pH mayor a 3 pero menor de 10, se consideran digestivo son secundarias a la ingesta de
agentes irritantes pero no cáusticos, con algu- cáusticos, especialmente de álcalis potentes
nas excepciones específicas, que serán co- que contienen hidróxido de sodio o de potasio
mentadas a lo largo del presente artículo. Áci- que se encuentran en productos de limpieza
do es toda sustancia que puede aceptar un de cocinas o vajillas domésticas.
par de electrones para formar un enlace.
En 1975 ya Peñaloza y colaboradores(5) des-
Dentro de las sustancias misceláneas que cribieron el procedimiento de endoscopia de
pueden actuar como cáusticos o corrosivos, urgencia practicado a 54 pacientes atendidos
se tiene el cemento que es un producto fuer- en el servicio de endoscopia del Hospital de
temente corrosivo y que posee un pH cerca- San José. Los pacientes atendidos estaban
no a 12; también esta el peróxido de hidróge- en rengos de edades entre los 17 meses y los
no (agua oxigenada) que a concentraciones 50 años, la mayor frecuencia (46%) se pre-
entre 20-40%, es corrosivo y cáustico, la cal sentó entre los 16-25 años. El agente quími-
cruda, el fósforo iónico y el óxido de etileno. co etiológico de mayor frecuencia fue la soda

1247
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cáustica con 19 casos, seguido del ácido clor- mucosas, especialmente del tracto digestivo,
hídrico con ocho casos y la potasa cáustica cuando son ingeridas. Igualmente pueden pro-
con seis casos. ducir irritación y lesión de vías respiratorias
superiores. Las lesiones oculares pueden pre-
Posteriormente Ángel, Gutiérrez y Arguello,(6) sentarse por contacto directo con la sustan-
Revisaron las historias clínicas de 90 pacien- cia en forma líquida o sólida o por contacto
tes que acudieron a urgencias del Hospital San con vapores del agente químico.
Juan de Dios de Bogotá entre los años 1971-
1989 por haber ingerido cáusticos, encontran- TOXICODINAMIA
do que 47% de los pacientes eran menores
de 20 años, 68% mujeres. Como causa de la Los factores que inciden en la gravedad de la
intoxicación se encontró que en 79% de los lesión por un álcali o un ácido cáustico son:
casos el motivo era suicidio, en 9% acciden-
tal y en 12% desconocida. Los álcalis repre- • pH.
sentaron 59,3% de los casos, seguidos de los • Concentración.
ácidos con el 25,2% y otros agentes cáusti- • Forma física en que se presenta (sólido o
cos con el 17.5%. Como agente etiológico in- líquido).
dividual, la soda cáustica fue el principal con • Duración del contacto con el tejido.
el 56% de los casos, seguido de el ácido clor- • Características del tejido con el cual se
hídrico con el 14.3% y el formol con el 8.8% pone en contacto.
de los casos. • Reserva titulable ácido – base.

En la revisión hecha por Téllez sobre intoxica- La reserva titulable ácido-base de una sustan-
ciones atendidas en los servicios de urgen- cia es la cantidad de una solución estándar
cias de 10 hospitales y clínicas de Bogotá du- ácida o básica que se requiere para titular un
rante los años 1993 y 1994, se encontró que álcali o un ácido respectivamente a un pH de-
la intoxicación por sustancias cáusticas y co- terminado.
rrosivas ocupó el 8º lugar como causa de con-
sulta toxicológica de urgencia con 142 casos En las quemaduras por sustancias alcalinas
que correspondieron a 2% del total de con- se presenta:
sultas toxicológicas de urgencias. Como agen-
te químico individual los mayores casos co- • Saponificación de las grasas.
rrespondieron a quemaduras por soda cáus- • Necrosis de los tejidos ricos en proteínas y
tica seguidos de ácido clorhídrico. del colágeno.
• Deshidratación tisular severa, con trombo-
sis de vasos venosos.
FISIOPATOLOGÍA • Los álcalis que tienen en su molécula fosfa-
tos, quelan el calcio iónico sérico, lo que
TOXICOCINÉTICA produce hipocalcemia.

En general las sustancias cáusticas o corrosi- En las quemaduras por ácidos fuertes se pre-
vas pueden ponerse en contacto con los teji- sentan los siguientes mecanismos de acción:
dos por diversas vías. Pueden producir lesio-
nes en piel por contacto directo con soluciones • Necrosis coagulativa y deshidratación
líquidas o sólidas. También pueden lesionar hística.

1248
CAPÍTULO II: AGENTES CÁUSTICOS Y CORROSIVOS

• Formación rápida de escara que tiende a Después de las primeras 24 horas del con-
limitar la penetración inicial de la sustancia tacto del tejido con la sustancia, aparece una
en estratos más profundos, pero que al des- sintomatología de mediano plazo, que puede
prenderse puede producir la perforación de ser una mediastinitis o peritonitis, cuando la
la mucosa. sustancia ha producido perforación de la mu-
• Cuando hay ingestión de la sustancia, se cosa esofágica o gástrica. Como consecuen-
produce espasmo del antro y del esfínter cia de la deshidratación tisular, del vómito, de
pilórico que cierra el paso al intestino, lo la hipertermia, de la pérdida de líquidos por
que un mayor tiempo de contacto del áci- perforación de tejidos y del aumento de la fre-
do con la mucosa gástrica. cuencia respiratoria, puede presentarse shock
hipovolémico que puede terminar en un co-
lapso cardiocirculatorio.
CUADRO CLÍNICO
La sintomatología tardía se presenta después
INGESTIÓN DE ÁLCALIS de 48 horas de la intoxicación. Puede apare-
cer insuficiencia respiratoria, explicada por la
Al momento de valorar en forma inicial un pa- aspiración de líquidos en el tracto respiratorio
ciente que ingirió un álcali, debe tenerse en y la correspondiente neumonitis química y fi-
cuenta la presentación física de la sustancia, brosis de los tejidos pulmonares. Las secue-
debido a que la forma sólida, por la dificultad las que con más frecuencia se presentan son
que tiene para fluir, tiende a unirse a las muco- la estenosis de la luz esofágica después de
sas bucales y por tanto las lesiones serán tres semanas, debido a que en este período
proximales y profundas. Si la sustancia inge- se inicia la fase de reparación y cicatrización
rida es líquida, las lesiones serán más exten- del tejido. También es frecuente que se pre-
sas, menos profundas y de predominio distal. sente como secuela fibrosis pulmonar, cuan-
do hay antecedentes de broncoaspiración.
La sintomatología inicial esta caracterizada por
dolor y sensación de quemadura en cavidad INGESTIÓN DE ÁCIDOS
bucal y orofaringe. Esta sintomatología pue-
de estar acompañada de glositis y gingivitis. Cuando se produce ingestión de una sustan-
Posteriormente se presenta sialorrea y vómi- cia ácida, la sintomatología inicial aparece rá-
to que puede ser hemático cuando ha habido pidamente y se caracteriza por dolor inmediato
lesión esofágica. Después de algunas horas en la cavidad bucal, en orofaringe y región
aparece dificultad respiratoria que se hace retroesternal. La sintomatología dolorosa se
progresiva y que esta explicada por la infla- acompaña de disfagia, sed intensa y vómito
mación orofaringea. Si a pasado líquido a la que puede ser hemático cuando hay lesión
vías respiratorias hay disnea severa secun- de las mucosas bucales.
daria a neumonitis química.
A mediano plazo la quemadura evoluciona con
Es necesario tener en cuenta por parte del edema epiglótico o laringeo que cursa con dis-
médico, que cuando la lesión es muy severa, nea, fiebre y taquicardia; se puede encontrar
el paciente puede no sentir dolor, porque se abdomen en tabla incluso sin perforación e
han destruido las terminaciones nerviosas lo- hipovolemia secundaria a deshidratación. Co-
cales; esta situación sucede con relativa fre- mo sintomatología tardía se puede encontrar
cuencia en las quemaduras por álcalis fuertes. acidosis metabólica, shock cardiocirculatorio,

1249
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

mediastinitis o peritonitis por perforación de las frecuentes se describen la estenosis antral


mucosas esofágica o gástrica, insuficiencia o pilórica, enteropatía perdedora de proteínas
respiratoria o insuficiencia renal. Como secue- y aclorhidria.

LESIONES ENDOSCÓPICAS POR CÁUSTICOS

GRADO DE LESIÓN CARACTERÍSTICAS


GRADO 0 Examen normal
GRADO I Hiperemia, edema, descamación superficial de la mucosa.
GRADO II Hiperemia, formación de lesiones ampollosas, ulceraciones superficiales, exudado fibrinoso.
GRADO III Formación de escaras, ulceraciones profundas, tejido friable, áreas de necrosis.
GRADO IV Lesiones con pérdida de sustancia, perforación de la mucosa.

INHALACIÓN DE ÁLCALIS O ÁCIDOS CONTACTO OCULAR

La sintomatología inicial esta caracterizada por Las lesiones oculares pueden ser producidas
tos, disnea y estridor respiratorio, que esta ex- por vapores de la sustancia o por salpicaduras
plicada por la irritación precoz de las vías res- del tóxico en forma líquida. El daño en el teji-
piratorias superiores. Posteriormente se pre- do ocular está en función del pH de la sustan-
senta edema de los tejidos afectados, con au- cia y de la capacidad del anión o del catión de
mento de las secreciones bronquiales, empeo- combinarse con las proteínas del tejido ocular.
ramiento de la dificultad respiratoria y bronco-
espasmo. Si no se realiza ninguna interven- Las quemaduras oculares por sustancias alca-
ción médica y la intoxicación sigue su curso, linas, tienen como característica importante su
aparece edema agudo de pulmón con insufi- efecto tóxico progresivo y tardío consistente
ciencia respiratoria severa que puede llevar a en infiltración, ulceración y perforación del te-
la muerte. jido ocular, después de la primera semana de
exposición.
Como síntomas tardíos se puede presentar
neumonía por sobreinfección del tejido lesio- La sintomatología inicial que se presenta es
nado. La secuela más importante y frecuente irritación conjuntival, lagrimeo y dolor ocular.
que se produce en la inhalación crónica de Posteriormente aparece fotofobia, edema ocu-
vapores de ácidos y álcalis, especialmente en lar y necrosis corneal. De acuerdo a la severi-
el medio laboral, es el desarrollo de una enfer- dad de la lesión puede presentarse hemorra-
medad pulmonar obstructiva crónica por re- gia intraconjuntival y subconjuntival. Las le-
acción inflamatoria bronquial y formación de siones oculares producidas por sustancias
tejido fibroso en pulmón. cáusticas y corrosivas, se pueden clasificar
de la siguiente forma:

1250
CAPÍTULO II: AGENTES CÁUSTICOS Y CORROSIVOS

LESIONES OCULARES POR CÁUSTICOS

GRADO DE LESIÓN CARACTERÍSTICAS


I Conjuntiva isquémica con lesión del epitelio corneal.
II Isquemia conjuntival del limbo acompañada de cornea deslustrada.
III Isquemia conjuntival, pérdida total del epitelio corneal y estroma borroso.
IV Isquemia conjuntival mayor de 50% y opacidad corneal.

CONTACTO DÉRMICO manas de ingestión de una sustancia cáusti-


ca tienen por objeto valorar la posible presen-
Al colocarse en contacto la piel con una sus- cia de lesiones cicatriciales o estenosis.
tancia cáustica, se produce sobre la dermis
necrosis coagulativa inmediata, con daño hís- La determinación del pH de los fluidos bioló-
tico ulcerativo y desprendimiento de la dermis gicos o tejidos con los cuales se puso en con-
expuesta. Cuando se trata de álcalis, las que- tacto la sustancia cáustica tiene valor en el
maduras que se producen son poco extensas momento de definir una conducta en el trata-
pero de mayor profundidad con necrosis de miento inicial y específico de la intoxicación.
tejidos cutáneo, subcutáneo, muscular y gra-
so. Puede comprometer inclusive el paquete
vasculo nervioso, y en estos casos el pacien- ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
te no percibe el dolor por lesión de las termi-
naciones nerviosas. La atención que se preste antes de llegar a
un centro hospitalario, esta orientada a impe-
Cuando se trata de quemaduras con ácidos, dir complicaciones clínicas secundarias a la
la extensión es mayor, son superficiales y poco lesión de base. En todos los casos se debe
profundas, pero se acompañan de intenso intentar conseguir el recipiente original a partir
dolor e inflamación. del cual se produjo la contaminación en el in-
dividuo lesionado, con el objeto de tomar el
pH de la sustancia. Se debe tener en cuenta
AYUDAS DIAGNÓSTICAS lo siguiente de acuerdo a la vía de exposición
al tóxico.
Radiografía de tórax en bipedestación para
descartar posible perforación que halla origi- INGESTIÓN DE CÁUSTICOS
nado mediastinitis o peritonitis. También es im-
portante para observar compromiso pulmonar • No inducir emesis por ningún medio (farma-
y de vías respiratorias bajas en caso de inha- cológico o mecánico). Esta medida es de
lación de vapores de la sustancia. suma importancia, debido a que el vómito
al pasar de regreso por la vía digestiva pro-
La endoscopia es una ayuda diagnóstica duce un mayor daño de la mucosa esofá-
esencial en los casos de ingestión de sustan- gica. Igualmente al presentarse vómito,
cias cáusticas. Las radiografías seriadas del aumenta el riesgo de que una pequeña par-
tracto gastrointestinal después de cuatro se- te de la sustancia y/o del contenido gástrico

1251
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

pase a las vías respiratorias con bronco- • Mantener vía venosa permeable para ad-
aspiración. ministración de líquidos endovenosos, para
• No administrar nada por vía oral hasta tan- corrección de deshidratación si la presenta.
to sea atendido en un centro hospitalario. • Retirar restos sólidos de la sustancia con
gasa húmeda y realizar lavado de la cavi-
CONTACTO OCULAR dad bucal con solución salina sin permitir
deglución del líquido.
• No intentar neutralización química del • No administrar nada por vía oral.
agente cáustico. • Administrar antiemético preferiblemente
• No administrar ningún tipo de fármaco has- por vía parenteral. Esta medida impide el
ta tanto no se haga una valoración de la reflujo de la sustancia y el contenido gás-
lesión ocular por un oftalmólogo. trico a través del esófago que puede agra-
var la lesión de la mucosa.
EXPOSICIÓN DÉRMICA • Si hay presencia de hemorragia de vías
digestivas altas, o evidencia clínica de rup-
• Retirar las ropas y demás prendas del in- tura de paredes esofágica o gástrica, no
dividuo lesionado que hallan sido contami- se deben administrar corticoides.
nadas por el cáustico.
• No intentar neutralización química del cáus- CONTACTO OCULAR
tico.
• Se debe hacer en forma precoz lavado
abundante y exhaustivo de la cavidad ocu-
INHALACIÓN DE VAPORES
lar con solución salina durante mínimo 30
minutos. El lavado se debe suspender
• Retirar al individuo del sitio de exposición y
cuando se obtiene pH neutro del líquido del
llevarlo a un sitio despejado y con aire fresco.
fondo de saco inferior.
• No se debe hacer neutralización química
de la sustancia presente en el ojo.
TRATAMIENTO INICIAL • Se pueden administrar analgésicos paren-
terales si ello fuere necesario por la inten-
En cualquier clase de exposición a un agente
sidad del dolor.
cáustico es recomendable que antes de iniciar
el tratamiento, se conozca en lo posible el agen-
EXPOSICIÓN DÉRMICA
te individual causante de la lesión, el pH en el
envase original y la concentración respectiva. • Retirar las ropas y otras prendas que cu-
bran al individuo en las zonas afectadas.
INGESTIÓN DE CÁUSTICOS • Realizar lavado de las áreas afectadas con
solución salina o agua durante 15-30 mi-
• No diluir la sustancia que esta en cavidad nutos y repetir el lavado cada cuatro horas
gástrica con administración de agua, ni en las primeras doce horas.
soluciones acuosas. • Realizar profilaxis antitetánica.
• Esta contraindicado practicar lavado gás- • Administración de líquidos parenterales
trico o utilizar carbón activado para reposición de pérdidas hídricas por
• Asegurar la permeabilidad de la vía aérea. quemadura.
Si hay edema faríngeo o traqueal se debe • Se debe realizar valoración del PH de la zona
practicar intubación endotraqueal. de contacto después de 24 horas, aún en el

1252
CAPÍTULO II: AGENTES CÁUSTICOS Y CORROSIVOS

paciente asintomático, porque en contacto • Administración de antibióticos únicamente


con álcalis la lesión puede tornarse sintomá- en el evento de evidenciarse infección
tica en forma retardada después de 24 horas. sobreagregada.
• Se debe realizar control del equilibrio áci-
INHALACIÓN DE VAPORES do base del paciente mediante gases
arteriales.
• Administrar oxígeno por cánula.
• Se recomienda iniciar antibioticoterapia so- CONTACTO OCULAR
lamente en presencia de infección sobre-
agregada. • En presencia de espasmo palpebral, insti-
• La utilización de corticosteroides es contro- lar 1-2 gotas de solución de lidocaína en el
versial entre los diferentes protocolos de ojo afectado.
manejo médico. • Si la quemadura es con ácido fluorhídrico,
se debe irrigar el ojo con solución de gluco-
nato de calcio a 1%.
TRATAMIENTO • Ocluir el ojo con apósitos estériles.
INTERDISCIPLINARIO
INGESTIÓN DE CÁUSTICOS EXPOSICIÓN DÉRMICA

• La endoscopia se debe realizar en forma • Cuando la quemadura es con ácido fluorhí-


precoz, en lo posible en las primeras 12 ho- drico, se puede realizar lavado del área
ras después de la ingestión del cáustico por afectada con cloruro de benzalconio o sul-
un servicio con experiencia en este tipo de fato de magnesio al 25%. También se pue-
endoscopia, por el alto riesgo de perfora- de practicar infiltraciones intradérmicas de
ción. Se recomienda practicar la endosco- la zona lesionada con gluconato de calcio
pia en aquellas sustancias que tengan un al 10%.
pH inferior a dos y superior a 10. También • De acuerdo a la gravedad de la quemadu-
se recomienda practicarla en pacientes que ra, el tratamiento de esta puede requerir el
presenten evidencias de quemaduras en la traslado a una unidad de quemados. El tra-
cavidad oral o que estén sintomáticos, in- tamiento específico de una quemadura de
dependiente del pH de la sustancia. tipo químico, es esencialmente semejante
• La práctica de la endoscopia esta contra- al tratamiento de una quemadura térmica.
indicada en pacientes con obstrucción de
las vías aéreas superiores, en aquellos que
presenten signos y síntomas de perfora- CRITERIOS DE REFERENCIA
ción gástrica o esofágica.
• La operación esta indicada en quemadu- INGESTIÓN DE CÁUSTICOS
ras esofágicas grado II y Grado III; en pa-
cientes que presenten pH alcalino del con- • Cuando no exista un servicio de endosco-
tenido gástrico y tengan antecedentes de pia digestiva con suficiente experiencia, se
haber ingerido un álcali. debe remitir al paciente a un centro espe-
• En quemaduras grado II se requiere nutri- cializado que tenga este servicio.
ción parenteral, con control de tolerancia • En presencia de perforación de mucosas
de líquidos a los siete días. esofágica o gástrica el paciente debe ser

1253
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

remitido a una institución hospitalaria de IV • Lesiones de vías respiratorias bajas que


nivel que tenga cuidados intensivos. comprometan pulmón y dejen como secue-
la fibrosis del tejido pulmonar.
CONTACTO OCULAR
Existe un pronóstico reservado para lesiones
• Se debe enviar a valoración por oftalmolo- con las siguientes características:
gía, sino se tiene este servicio en la institu-
ción donde se atiende al paciente. • Lesiones oculares Grado III, es decir lesiones
con pérdida total del epitelio, estroma borro-
INHALACIÓN DE VAPORES so e isquemia conjuntival superior al 33%.
• Lesiones endoscopicas Grado III, es decir
• Se remitirá al paciente a una institución que ulceraciones profundas, tejido friable y
tenga servicio de radiología, si la institu- áreas de necrosis.
ción donde se atiende no posee este ser-
vicio.
LECTURAS RECOMENDADAS

1. Cattan P, Munoz-Bongrand N, Berney T, et al.


PRONÓSTICO Extensive abdominal surgery after caustic inges-
tion. Ann Surg 2000; 231:519-23.
Existe un pobre pronóstico para la salud y 2. Gunnarsson M. Local corticosteroid treatment of
calidad de vida, en pacientes que presenten caustic injuries of the esophagus. A preliminary re-
lesiones de las siguientes características: port. Ann Otol Rhinol Laryngol 1999; 108:1088-90.
3. Jaillard S, Nseir S, Metois D, et al. Extensive
corrosive injuries of the upper airways and gastro-
• Lesiones oculares grado IV, es decir lesio-
intestinal tract. J Thorac Cardiovasc Surg. 2002;
nes con opacidad corneal e isquemia 123:186-8.
conjuntival superior a 50%. 4. Kim YT, Sung SW, Kim JH. Is it necessary to resect
• Lesiones endoscópicas grado IV, es decir the diseased esophagus in performing recons-
con perforación o lesiones con pérdida de truction for corrosive esophageal stricture? Eur J
sustancia. Cardiothorac Surg 2001; 20:1-6.

1254
CAPÍTULO III: INTOXICACIÓN POR ESCOPOLAMINA

CAPÍTULO III

Intoxicación por escopolamina

Jorge Salcedo, MD
Jefe Departamento de Urgencias
Fundación Santa Fe de Bogotá

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones de Facultades (Escuelas) de Medicina

INTRODUCCIÓN EPIDEMIOLOGÍA

L a escopolamina es un alcaloide cua-


ternario que actúa como antagonista com-
petitivo de la acetilcolina en los receptores
La intoxicación en Colombia es frecuente con
fines delictivos. Se utiliza mezclada con depre-
sores del sistema nervioso central en una
muscarínicos. Es soluble en agua. mezcla conocida como “burundanga”.

Se encuentra en algunas especies de plantas


de la familia de las solanáceas. Entra al orga- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
nismo por vía oral con rápida absorción.
Es necesario conocer la dosis aproximada
consumida por el paciente, así como la ruta
FARMACODINAMIA de administración y la ingesta de otras sus-
tancias que puedan aumentar la toxicidad de
La escopolamina es un antagonista competi- la escopolamina.
do de la acetilcolina en la terminal posganglio-
nar del sistema nervioso parasimpático. No Los síntomas y signos encontrados en la eva-
tiene ningún efecto sobre los receptores nico- luación inicial incluyen:
tínicos. Cruza la barrera hematoencefálica por
lo cual puede producir manifestaciones del • Mucosas y piel secas.
sistema nervioso central. • Disfagia.
• Fotofobia.
El efecto de esta sustancia es bastante marca- • Visión borrosa.
do en el músculo liso del sistema gastroin- • Taquicardia.
testinal. • Retención urinaria.

Los síntomas ocurren 30-60 minutos después También puede encontrarse hipertermia, con-
de la ingesta y pueden continuar por 24-48 fusión, agitación, convulsiones y coma. Es
horas debido a que la escopolamina retarda común la amnesia de los eventos sucedidos
el vaciamiento gástrico. después de la ingesta de la escopolamina.

1255
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

En el examen físico se puede encontrar: peso. También puede administrarse catártico


• Signos vitales: taquicardia, hiperpirexia, salino como sulfato de magnesio 40 mg VO.
hipertensión o hipotensión.
• Ojo, nariz y garganta: midriasis, mucosas ANTÍDOTO
secas.
• Abdomen: ruidos intestinales disminuidos, El antídoto es la fisostigmina, un medicamen-
globo vesical. to inhibidor de la acetilcolinesterasa. Puede
revertir todos los síntomas anticolinérgicos
asociados con esta intoxicación. La dosis de
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS fisostigmina es de 0,5-2 mg IV. Cuando el diag-
nóstico es correcto se observa una rápida res-
La escopolamina puede encontrarse en orina puesta. La dosis puede repetirse cada 15 mi-
o sangre. Es necesario recoger la sangre en nutos si no hay disminución marcada de los
tubo sin anticoagulante. La muestra de orina síntomas.
debe ser de mínimo 50 mL.
La fisostigmina es capaz de producir una cri-
La prueba mas importante es la de orina debi- sis colinérgica (convulsiones, depresión res-
do a que la escopolamina se puede detectar piratoria, asistolia) con la posibilidad de llevar
hasta seis horas después de la intoxicación. al paciente a la muerte.

Debido a que la mayoría de los individuos res-


TRATAMIENTO ponden al manejo básico con medidas de so-
PREHOSPITALARIO porte, solo se indica el uso de fisostigmina en
los siguientes casos:
El paciente debe ser llevado de forma rápida
a un centro asistencial. Durante el transporte • Ausencia de mejoría con el tratamiento ini-
se realiza la evaluación y manejo del ABC. cial.
No se recomienda el uso de fisostigimina como • Taquiarritmias con inestabilidad hemodiná-
parte del manejo prehospitalario. mica.
• Convulsiones.
• Agitación extrema.
TRATAMIENTO
El manejo inicial debe estar orientado a esta- LECTURAS RECOMENDADAS
bilizar la condición clínica del enfermo. Es muy
importante colocar sonda nasogástrica y son- 1. Gutiérrez M. Intoxicación por burundanga. En:
da vesical para aliviar la incomodidad que pro- Guías para manejo de urgencias. Ministerio de Sa-
duce la distensión gástrica y la distensión vesi- lud, Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina. Bogotá,
cal respectivamente. Las sondas también son
1996.
útiles para tomar muestras de toxicología. 2. Hamilton RJ, Perrone J, Hoffman R, et al. A
descriptive study of an epidemic of poisoning
INHIBICIÓN DE LA ABSORCIÓN caused by heroin adulterated with scopolamine. J
Toxicol Clin Toxicol 2000; 38:597-608.
Se utiliza carbón activado y lavado gástrico. 3. Ziskind AA. Transdermal scopolamine-induced
La dosis de carbón activado es de 1 g/kg de psychosis. Postgrad Med 1988; 84:73-6.

1256
CAPÍTULO IV: INTOXICACIÓN ALIMENTARIA

CAPÍTULO IV

Intoxicación alimentaria

Oscar Alfredo Beltrán Galvis, MD


Servicio de Gastroenterología
Clínica San Pedro Claver
Bogotá

L a intoxicación alimentaria es una causa fre-


cuente de morbilidad y mortalidad en los
países subdesarrollados. Es un síndrome que
reservorio es el intestino de las aves y es ad-
quirido por ingerir carnes de aves crudas.

resulta de la ingestión de alimentos contamina- Las salmonellas pueden ser divididas en dos
dos con micro-organismos, toxinas microbia- grupos: las que causan la fiebre tifoidea,
nas o sustancias químicas. La incidencia ac- Salmonella typhi y Salmonella paratyphi, y las
tual de la intoxicación alimentaria es desco- numerosas salmonellas no tifoideas, como S.
nocida, pero en los Estados Unidos se estima enteritidis, S. typhimurium, etc. La bacteria
en 76 millones de casos, 325.000 hospitaliza- está presente en los intestinos de aves, mamí-
ciones y 5.000 muertes por año. feros, y es adquirida por la ingesta de comi-
das crudas de origen animal.
Aunque se han descrito más de 250 diferentes
enfermedades asociadas con ingesta de ali- La Escherichia coli O157:H7 es un patógeno
mentos contaminados, esta guía se refiere a cuyo reservorio es el ganado; el ser humano
los síndromes agudos asociados con la into- la adquiere por el consumo de alimentos o
xicación alimentaria, cuya sintomatología co- aguas contaminados con heces de vacunos;
mienza dentro de las 72 horas siguientes a la 3% a 5% de las personas contaminadas de-
ingestión, y cuyas características clínicas in- sarrollan el síndrome hemolítico urémico.
cluyen una variedad de síntomas gastrointes-
tinales. Los calicivirus son una causa frecuente, pero
rara vez es diagnosticada porque no hay prue-
bas diagnósticas disponibles. Causa una dia-
ETIOLOGÍA rrea aguda, usualmente con más vomito que
diarrea, cuadro que se resuelve en dos días.
Los gérmenes más comúnmente asociados No se conoce un reservorio, y se propaga de
con alimentos contaminados son las bacterias persona a persona. Los manipuladores de ali-
Campylobacter, salmonellas y Escherichia coli mentos infectados contaminan los alimentos
O157:H7, y un grupo de virus llamados calici- que preparan, si tienen los virus en sus manos.
virus, conocidos también como Norwalk o vi-
rus similares a Norwalk. Algunas enfermedades se asocian con intoxi-
caciones alimentarias: las infecciones produ-
El Campylobacter es el agente causal más fre- cidas por shiguelas, hepatitis A y los parási-
cuente de diarrea infecciosa en el mundo. Su tos Giardia lamblia y Cristosporidium.

1257
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

La intoxicación alimentaria puede ser produ- 5. Síntomas clínicos predominantes: vómito,


cida por una toxina formada por un microorga- diarrea y dolor abdominal.
nismo en la comida. La bacteria Staphyloco- 6. Cuando la causa es enterotoxinas por
cus aureus puede producir una toxina que cau- Staphylococus aureus, es infrecuente la
sa intenso vómito. El botulismo, una rara enfer- presencia de fiebre y los vómitos son tan
medad producida por una bacteria, el Clostri- importantes como la diarrea.
dium botulinum, genera una toxina paralítica.
¿CUÁLES SON LAS INDICACIONES PARA
Algunos productos químicos también son cau- REALIZAR UNA EVALUACIÓN CLÍNICA EX-
sa de intoxicación alimentaria. HAUSTIVA, INCLUYENDO PRUEBAS DIAG-
NÓSTICAS ADICIONALES?
¿CUÁLES SON LOS ALIMENTOS MÁS
FRECUENTEMENTE ASOCIADAS CON IN- 1. Diarrea sanguinolenta.
TOXICACIÓN ALIMENTARIA? 2. Vómito prolongado.
3. Diarrea que produce rápida deshidratación.
Los alimentos y los patógenos más frecuen- 4. Fiebre elevada >39°C.
temente asociados son: 5. Diarrea prolongada (más de 5 días).
• Huevos y derivados del huevo. 6. Compromiso neurológico manifestado por
• Carne de ave inadecuadamente prepara- parestesias, debilidad motora o parálisis de
da (Salmonella enteritidis). pares craneanos.
• Leche no pasteurizada (Campylobacter sp,
E. coli O157:H7). ¿CÓMO SOSPECHAR, POR EL CUADRO
• Cremas o mayonesas comerciales o arte- CLÍNICO, UNA POSIBLE ETIOLOGÍA?
sanales (Staphylococus aureus enterotoxi-
Los pacientes se pueden presentar con un
génico).
cuadro sugestivo de diarrea de origen no in-
• Moluscos o crustáceos crudos (Vibrio para-
flamatorio alto (intestino delgado):
hemoliticus).
• Diarrea acuosa y abundante.
• Carnes crudas o vegetales lavados inade-
• Frecuentes deposiciones diarias.
cuadamente.
• Dolor abdominal de tipo cólico.
• Arroz con pollo (Bacteroides cereus).
• Borborigmo.
• Comidas con alto contenido proteico, ja-
• Deshidratación.
món, aves, tomate (Staphylococus aureus).
Los gérmenes más probables son:
¿CUÁNDO SOSPECHAR UNA INTOXICA- • Virales, como el agente de Norwalk.
CIÓN ALIMENTARIA? • Toxinas (Staphylococus aureus, Bacillus
cereus).
Se debe sospechar intoxicación alimentaria en • Parasitarias (Giardia lamblia).
las siguientes circunstancias clínicas: • Vibrio cholerae.
1. Periodo de incubación corto (habitualmen- • Escherichia coli enterotoxigénica.
te menos de 6 horas).
2. Presencia de otros pacientes infectados. Los pacientes se pueden presentar con un
3. Historia de exposición a una fuente alimen- cuadro sugestivo de diarrea de origen infla-
taría común. matorio bajo (colon):
4. Breve duración (desde pocas horas hasta • Diarrea con sangre.
1 ó 2 días). • Pujo, tenesmo rectal.

1258
CAPÍTULO IV: INTOXICACIÓN ALIMENTARIA

• Fiebre. Aunque la imposibilidad de lograr un diagnós-


• Deshidratación infrecuente. tico específico puede limitar el apropiado ma-
nejo y tratamiento de muchas infecciones, y
Los gérmenes más probables son: pese a que la historia y los hallazgos clínicos
• Bacterias: Salmonella, Campylobacter, pueden aportar datos importantes para sus-
Eschericihia coli enteroinvasiva o enterohe- tentar la sospecha etiológica, en algunas cir-
morrágica O157:H7, Shiguela, Vibrio cunstancias un tratamiento empírico puede ser
parahaemoliticus. inapropiado. Se reconoce que el tratamiento
• Parasitarios: Entamoeba hystolitica. con antibióticos en casos de infección por E.
coli O157:H7 puede incrementar el riesgo de
Además de las enfermedades causadas por síndrome hemolítico urémico o el tratamiento
intoxicación alimentaria, en el diagnóstico di- con antibióticos de pacientes con salmonelosis
ferencial de las enfermedades del tracto gas- puede aumentar la frecuencia de portadores,
trointestinal deben incluirse el síndrome de in- con una mayor tasa de recaída clínica.
testino irritable, la enfermedad inflamatoria in-
testinal, el cáncer, el uso de medicación (inclu- Aunque los cultivos de heces son comúnmen-
yendo la colitis por antibióticos asociada con te solicitados, su utilidad ha sido cuestionada
Clostridium difficile), síndromes de malabsor- por su bajo rendimiento. En 1997 The Food-
ción, entre otras. El diagnóstico diferencial de borne Diseases Active Surveillance Network
pacientes con síntomas neurológicos es más (foodnet) realizó el seguimiento de 264 labo-
complejo, pero debe insistirse en la historia ratorios clínicos de la red que procesaron
de ingestión reciente de comida de mar conta- 223.212 muestras de materia fecal en el año
minada, envenenamiento por hongos, intoxi- 1996. Los cultivos fueron positivos en 0,9%
cación por químicos como órganofosforados para Salmonella, 0,6% para Shiguela, 1,4%
o ingestión de enlatados, que requieren una para Campylobacter y 0,3 para E. coli
actitud de alta sospecha diagnóstica por ser O157:H7.
enfermedades mortales si no se inicia una te-
rapia agresiva y medidas de soporte vital (so- De 30.463 muestras remitidas a laboratorios
porte respiratorio, administración de antitoxi- en 10 hospitales en los Estados Unidos, de
na o atropina). los especímenes que documentaron E. coli
O157:H7, 63% tenían sangre macroscópica y
91% eran de pacientes con historia de dia-
EXÁMENES DIAGNÓSTICOS rrea sanguinolenta. Si se analizan los costos
por resultado positivo, pese a ser éste impor-
Varios factores limitan el estudio de las cau- tante, la información resulta sesgada por ser
sas de intoxicación alimentaria: la evolución imprecisa, dada la relativa insensibilidad de
autolimitada que caracteriza a muchos de los las pruebas para la mayoría de los gérmenes
casos afectados, la diversidad de agentes, la posibles y la pobre selección de las muestras
ausencia de un examen microbiológico univer- para ser cultivadas.
sal, la demora obligada para recibir los resulta-
dos, la falta de disponibilidad de ciertas técni- Las indicaciones para realizar estudios etioló-
cas en la mayoría de los laboratorios, tales gicos en adultos con sospecha de diarrea ad-
como el estudio de toxinas o cultivos espe- quirida en la comunidad, especialmente la
ciales. asociada con intoxicación alimentaria, son:

1259
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

1. Diarrea sanguinolenta. Con relación al síndrome diarréico agudo, se


2. Vómito prolongado. han planteado diferentes estrategias:
3. Diarrea que produzca rápida deshidratación.
4. Fiebre elevada >39°C. Medidas dietéticas. Régimen blando libre de
5. Diarrea prolongada (más de 5 días). residuos. Pocos ensayos han sido publicados
6. Compromiso neurológico, manifestado por sobre el impacto de la dieta en el alivio de la
parestesias, debilidad motora o parálisis de diarrea y no se ha demostrado que altere la
pares craneanos. evolución natural de la enfermedad, aunque
7. Paciente inmunocomprometido. los grupos sin restricción sí presentan más
náuseas. El impacto terapéutico está más re-
Varios grupos han sugerido que la mejor apro- lacionado con el fraccionamiento de la alimen-
ximación en un paciente con enfermedad dia- tación que con el tipo de alimentos.
rréica, y particularmente la asociada con intoxi-
cación alimentaria, es la siguiente: Sales de rehidratación oral. La evidencia es
1. Confirmar si es diarrea de origen inflama- sólida en cuanto a recomendar las soluciones
torio o no, realizando un examen coproscó- de rehidratación oral en todos los pacientes
pico con evaluación de leucocitos en mate- con diarrea. Sus ventajas son su seguridad,
ria fecal, o una prueba de lactoferrina no causan dolor, son menos costosas y son
(LeuKotest). superiores a los líquidos endovenosos en las
2. Realizar cultivos en casos de diarrea de personas capaces de tomar líquidos orales.
origen inflamatorio. El coprocultivo debe in-
cluir inicialmente Salmonella sp., Shiguella En los adultos, con excepción del cólera, la
sp y Yersinia. Los estudios para Campylo- diarrea por E. coli enterotoxigénica y ocasio-
bacter o el estudio de toxinas preformadas nalmente por S. enteritidis, rara vez produce
generalmente no son disponibles. En nues- deshidratación severa. Las sales permiten re-
tro medio, por la tecnología requerida, tam- poner las pérdidas de sodio, potasio y bicarbo-
poco es posible contar con el diagnóstico nato. Algunos pacientes con diarrea leve pue-
de E. coli enterotoxigénica o entero-hemo- den prevenir la deshidratación con una ingesta
rrágica. extra de líquidos (jugos claros, caldos, sopas,
3. Debe realizase examen parasitológico en etc.).
las diarreas persistentes.
Loperamida. Los antidiarreicos disminuyen el
En pacientes con diarrea sanguinolenta y sin número de deposiciones y limitan las pérdidas
leucocitos en las heces, se debe sospechar hidroelectrolíticas. En los adultos, algunos
E. coli enterohemorrágica (O157:H7). estudios de eficacia han demostrado su bene-
ficio clínico, reduciendo la frecuencia y dura-
ción de la diarrea. Aunque se había señalado
TRATAMIENTO que estos fármacos podrían ser contraprodu-
centes en diarreas por gérmenes enteroinvasi-
En los pacientes con síntomas gastrointesti- vos al incrementar el tiempo de exposición de
nales por intoxicación alimentaria, los objetivos la pared intestinal a los patógenos, tal concep-
del tratamiento son aliviar los síntomas, evitar to ha sido reevaluado. Cuando se combina con
las complicaciones, acortar la enfermedad y antimicrobianos, algunos estudios demuestran
evitar la diseminación de los agentes patóge- una mejor evolución del cuadro clínico. Este
nos a la comunidad. beneficio parece estar restringido a las

1260
CAPÍTULO IV: INTOXICACIÓN ALIMENTARIA

diarreas por ciertos patógenos, por ejemplo preocupación es la creciente resistencia de


Shigella, y no se observa en diarreas de otras muchos gérmenes a los antibióticos utilizados
etiologías. De todos modos, su uso no es per- para la diarrea, incluyendo las quinolonas. Es
judicial y debe quedar al criterio del médico por ello que debe imperar un criterio restricti-
frente a las condiciones específicas del pa- vo y, en la medida de lo posible, administrar
ciente. los antibióticos sólo según la sensibilidad del
germen en cada medio hospitalario.
Las dosis de loperamida recomendables son:
una dosis inicial de 4 mg y luego 2 mg des-
pués de cada deposición, sin sobrepasar los INDICACIONES
16 mg/día. PARA EL USO DE ANTIBIÓTICOS:

No se recomienda el uso de la loperamida en No indicados: Rotavirus, salmonelosis no ti-


los niños, especialmente en menores de 2 foidea, cristosporidio, otras infecciones virales.
años.
Definitivamente indicados: Shiguelosis, có-
Antibióticos. Debido a que la mayoría de las lera, amebiasis, giardiasis.
diarreas por intoxicaciones alimentarias son
autolimitadas y no sobrepasan los 3 días, el Indicados en ciertas ocasiones: E. coli ente-
uso de antimicrobianos se considera innece- roinvasiva, E. coli enteropatógeno, Campylo-
sario. Los pacientes con cuadros compatibles bacter, Clostridium difficile, Yersinia, vibrio no
con toxinas preformadas no requieren antibió- colérético, salmonelosis en inmunosuprimidos.
ticos, debido a su breve duración. Podrían re-
querir antimicrobianos sólo los pacientes con
diarrea persistente (>5 días) y pacientes se- LECTURAS RECOMENDADAS
leccionados con disentería.
1. Ratclife E, Koplan J, Henney J, et al. Diagnosis
and management of foodbornes illnesses. MMWR.
Tratamiento antibiótico empírico. En adultos
2001; 50(RR02):1-69
con diarrea y sospecha de etiología bacteriana 2. Fica A. Manejo ambulatorio del síndrome diarreico
invasora, puede estar indicado el uso de anti- agudo en adultos. Rev Chil Infectol 2001; 19:4-12.
bióticos. La ciprofloxacina ha sido compara- 3. Guerrant R, Van Gilder T, Steiner T, et al. Practice
da en diferentes estudios con placebo, en do- Guidelines for the Management of Infectious
sis de 500 mg cada 12 horas por 5 días, de- Diarrhea. IDSA. Clin Infect Dis 2001; 32:331-350.
mostrando una reducción en la duración de 4. Oldfield E, Wallace M. The role of antibiotics in
la diarrea, de la fiebre y de otros síntomas en the treatment of infectious diarrhea. Gastroenterol
Clin North Am 2001; 30:1-27.
forma significativa.
5. Procop G. Gastrointestinal infections. Infect Dis
Clin North Am 2001; 15:1-41.
Sin embargo, el uso indiscriminado de antibió- 6. Consenso. Síndrome Diarreico agudo. Recomen-
ticos ha sido cuestionado por la evidencia de daciones para el diagnóstico microbiológico. So-
que en algunos casos el uso de antimicrobia- ciedad Chilena de Infectología. Rev Chil Infectol
nos no reduce la duración de la diarrea. Otra 2001; 19:1-22.

1261
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Intoxicación por salicilatos

María Luisa Cárdenas, MD, MSc


Profesor Asistente
Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia
Bogotá

GENERALIDADES
Y EPIDEMIOLOGÍA

L os salicilatos, ampliamente utilizados como


analgésicos, son fármacos de venta libre
(OTC, over the counter). Se utilizan también
nal, y la excreción depende de la dosis y del
pH urinario (como salicilato libre); el pH alca-
lino favorece la excreción.
como queratolíticos y hacen parte de formas
farmacéuticas combinadas, como los antigri- Los preparados más usados son el salicilato
pales. de sodio y el ácido acetil salicílico (AAS, o ASA
en la sigla en inglés). Otros son el salsalato,
En Colombia no se tienen estadísticas acerca la salicilamida, el diflunisal, el salicilato de
de casos clínicos de intoxicación atendidos en metilo y el ácido salicílico.
los servicios de urgencias. Sólo se consigue la
información aportada por la revisión de protoco- El AAS es un ácido débil con un pKa 3,5 que,
los de autopsia del Instituto de Medicina Legal luego de ser absorbido es hidrolizado a ácido
y Ciencias Forenses, sede Bogotá, realizada salicílico, que en su mayor parte se encuentra
por el Departamento de Toxicología de la Fa- en forma ionizada (99%). Tiene volumen de
cultad de Medicina de la Universidad Nacional distribución bajo, de 0,15 l/K, valor que no es
de Colombia: en el periodo comprendido entre constante, pues depende de las concentracio-
1996 y 2001 se registran dos casos de muerte nes séricas del fármaco, de los niveles sanguí-
causada por ácido acetil-salicílico (AAS). neos de albúmina y de la competencia estable-
cida con otros fármacos por los sitios de unión
a la albúmina; el volumen de distribución pue-
FISIOPATOLOGÍA de aumentar hasta más de 0,6 l/K. Los salici-
latos se unen ampliamente a la albúmina, atra-
FARMACOCINÉTICA viesan la barrera hematoencefálica, la pla-
centa y pasan a la leche materna. En el hígado
Los salicilatos son de absorción rápida por la son biotransformados principalmente a ácido
vía oral y logran la concentración máxima en salicilúrico (conjugado con glicina), glucuró-
el plasma tras dos horas de la ingestión; se nido fenólico y acil glucurónido, y se excretan
distribuyen por casi todos los tejidos del orga- de esta forma junto con un 10% como ácido
nismo; se excretan principalmente por vía re- salicílico libre. Además, una pequeña fracción

1262
CAPÍTULO V: INTOXICACIÓN POR SALICILATOS

se oxida a ácido gentísico que, al conjugarse que favorecen la acidosis láctica, el incremen-
con glicina, forma ácido gentisúrico. to de cuerpos cetónicos llevando a acidosis
metabólica. Se presenta edema cerebral.
Se elimina principalmente por vía renal, según
la concentración plasmática de salicilato libre y Sistema respiratorio: edema pulmonar por
del pH urinario, y al aumentar la dosis hasta sa- el incremento de la permeabilidad capilar e
turar las vías de biotransformación, pasa de la inhibición de prostaciclinas con la subsecuente
cinética de orden 1 (eliminación proporcional al alteración de la interacción entre vasos y pla-
nivel sérico) a cinética de orden 0 (eliminación quetas; el riesgo de edema se incrementa en
constante); la variación del pH hacia la alcalini- personas mayores fumadoras.
dad favorece la eliminación al disminuir la reab-
sorción pasiva en el túbulo distal porque aumen- Sangre: alteración en la función plaquetaria;
ta la fracción ionizada del metabolito y ésta difun- puede interferir con el metabolismo de la vita-
de menos. La vida media varía entre 2 y 40 ho- mina K y por tanto con la síntesis de factores
ras conforme aumenta la dosis de salicilato inge- de coagulación, lo que favorece la presencia
rido hasta la sobredosis aguda. El incremento de hemorragias por incremento en el tiempo
de la diuresis aumenta también la eliminación, de protrombina (PT).
por aumento del filtrado glomerular.
Metabolismo de carbohidratos: se puede
desarrollar hipoglucemia con neuroglucopenia
Tanto en el feto como en enfermos hepáticos
aunque se mantengan cifras de glucemia
o renales, así como en ancianos, hay disminu-
normales.
ción en la velocidad de excreción por su me-
nor eliminación o por la inmadurez de los sis-
temas metabólicos.
CUADRO CLÍNICO
DOSIS TÓXICA En la intoxicación aguda, se presenta vómito
pocas horas después de la ingestión seguido
La ingestión aguda de una dosis entre 150 y de hiperpnea, tinnitus y letargia. En el examen
200 mg/kg, lo que implica la ingestión de 25 de gases arteriales se puede observar alcalo-
tabletas de 500 mg para una persona de 70 sis respiratoria y la acidosis compensatoria,
kg, lleva a la intoxicación moderada. La in- lo cual depende de la dosis y del tiempo trans-
toxicación severa ocurre con dosis de 300 a currido desde la ingestión.
500 mg/kg, o sea la ingestión de 40 tabletas
de 500 mg para una persona que pesa 70 kg. La intoxicación severa cursa con convulsio-
nes, hipoglicemia, hipertermia (por incremen-
Las manifestaciones tóxicas de los salicilatos to del metabolismo basal) y edema pulmonar.
se presentan en: La muerte ocurre por alteración en el sistema
nervioso central o por colapso cardiovascular.
Sistema nervioso central: estimulación del
centro respiratorio que produce tinnitus e Según el nomograma de Done, se han esta-
hiperventilación debido al aumento de la sen- blecido cuatro niveles que determinan la gra-
sibilidad al pH y a la PaCO2, lo que conduce a vedad de acuerdo a las concentraciones
alcalosis respiratoria, deshidratación y final- séricas y al número de horas transcurridas lue-
mente activa los mecanismos compensatorios go de la ingestión del salicilato.

1263
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Asintomático: el paciente refiere algunas TRATAMIENTO


molestias. INTERDISCIPLINARIO
Ligero: aumento de la frecuencia respiratoria.
Moderado: Hiperpnea marcada, letargia o ex- DISMINUCIÓN DE LA ABSORCIÓN
citabilidad.
Severo: Coma y convulsiones. Tan pronto el paciente ingresa al servicio de
urgencia, se realiza el lavado gástrico, incluso
hasta 12 horas después de la ingestión del sali-
AYUDAS PARA EL DIAGNÓSTICO cilato. Hay que tener en cuenta que el vacia-
miento gástrico se retarda, en especial si se
Usualmente se tiene el antecedente en la his- trata de presentaciones farmacéuticas que tie-
toria clínica de la ingestión de una sobredosis nen recubrimiento entérico o presentaciones
de salicilato. que sean de liberación retardada, lo que pue-
de originar picos de salicilemia a las 24 horas.
Si no se cuenta con esta información, el análisis
de gases arteriales revela la combinación de Si se han ingerido altas dosis de salicilatos se
alcalosis respiratoria con acidosis metabólica. hace necesaria la administración frecuente de
carbón activado, a intervalos de 3 a 5 horas,
Niveles séricos mayores de 90-100 mg/dL hasta lograr disminuir los niveles de salicilemia.
usualmente se asocian con toxicidad grave.
Se pueden utilizar catárticos, pero teniendo
La titulación del bicarbonato de sodio por de- en cuenta la función renal por el riesgo de oca-
bajo de 8 meq/L indica acidosis. sionar hipermagnesemia.

Se deben deterrminar las concentraciones sé-


ricas de electrolitos, como potasio, cloro, so- MEDIDAS QUE INCREMENTAN
dio, calcio, así como la glucemia. LA ELIMINACIÓN

El uroanálisis puede demostrar proteinuria y Corrección de la acidosis y del estado de des-


hematuria. hidratación. La administración de bicarbona-
to de sodio mejora la tasa de eliminación del
salicilato, pero siempre bajo el control de ga-
TRATAMIENTO INICIAL ses arteriales.

Las medidas previas al ingreso al servicio de Hemodiálisis: ayuda a la eliminación del sali-
urgencias incluyen la inducción del vómito, cilato además de corregir las alteraciones áci-
siempre y cuando el paciente esté conciente, do-báse e hidroelectrolíticas. Está indicada en
y la administración de carbón activado para pacientes con intoxicación aguda que tienen
retardar la absorción del salicilato desde el niveles séricos de 120 mg/dL o con severa
intestino. Si existe hipertermia se deben apli- acidosis u otras manifestaciones como con-
car medios físicos para bajar la temperatura. vulsiones, y en aquellos con función renal dis-
minuida. Es útil en intoxicación crónica con
niveles séricos de 60 mg/dL acompañados de
acidosis, confusión, letargia, especialmente en
pacientes ancianos.

1264
CAPÍTULO V: INTOXICACIÓN POR SALICILATOS

Hemoperfusión: tiene utilidad para remover PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN


el salicilato rápidamente pero no corrige los
disturbios hidroelectrolíticos o ácido–báse. No se deben administrar salicilatos en niños
con varicela u otras infecciones virales para
evitar el desarrollo del síndrome de Reye. Se
TRATAMIENTO SINTOMÁTICO debe explicar muy bien a los padres cuál es
la dosis y la forma de medirla para administrar-
Si se presenta hipoprotrombinemia, corregir la adecuadamente.
con vitamina K en dosis de 2,5 a 5 mg/día.
Evitar la aplicación tópica del ácido salicílico
Controlar la temperatura con medios físicos. en una zona extensa del cuerpo. Explicar a
los padres la importancia de no adicionar al
Las convulsiones se pueden controlar con dia- tratamiento con salicilatos en otras presenta-
zepam o con barbitúricos, siempre y cuando ciones que puedan contenerlos solos o en
se mantenga el enfermo conectado al respi- combinación.
rador.

Si se presenta depresión del SNC acompaña- RECOMENDACIONES SOBRE


da de convulsiones de difícil control y el pa- ACTUALIZACIÓN E INVESTIGACIÓN
ciente tiene cifras normales de glucemia, debe
recibir glucosa (50 mL de dextrosa al 50% o 1 En nuestro país debe llevarse el control epide-
mL/kg) por la neuroglucopenia. miológico de los casos de intoxicaciones por
salicilatos, ya que el nivel de automedicación
Si a pesar de disminuir los niveles de salici- es alto, además, por ser un medicamento de
lemia persiste la depresión del SNC, se debe venta libre y de fácil acceso para los niños
empezar tratamiento para el edema cerebral por descuido de los padres.
con manitol o glucocorticoides.

LECTURAS RECOMENDADAS
CRITERIOS DE REFERENCIA 1. Cazals Y. Auditory sensori-neural alterations indu-
ced by salicylate. Prog Neurobiol 2000; 62:583-631.
El paciente debe ser atendido en unidad de 2. Córdoba, D. Toxicología. 3a impresión. Impresio-
cuidado intensivo (UCI) cuando la intoxicación nes Vieco e hijas. Medellín, 2001.
es moderada o severa. Se requiere la atención 3. Dargan PI, Jones AL. Acetaminophen poisoning: an
update for the intensivist. Crit Care 2002; 6:108-110.
por psiquiatría una vez se ha estabilizado, si el
4. Hamm J. Acute acetaminophen overdose in ado-
origen de la intoxicación fue intento de suicidio. lescents and adults. Crit Care Nurse 2000; 20:69-74.
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6. Jones A. Recent advances in the management of
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Si el nivel de bicarbonato se logra mantener 7. Lane JE, Belson MG, Brown DK, Scheetz A. Chronic
por encima de 15 mEq/L la recuperación es acetaminophen toxicity: a case report and review of
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puesta es muy lenta. 8. Olson K. Poisoning and Drug Overdose. Thirth
editions. Appleton Lange. Norwalk, 1998.

1265
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Intoxicación por cocaína

Maria Clara Pinzón Iregui, MD


Departamento de Medicina Interna
Consultoría en Adicciones
Jefe Sección de Toxicología
Fundación Santa Fe de Bogotá
INTRODUCCIÓN

L a cocaína es el principal alcaloide de las


hojas del Erythroxylon coca, arbusto origi-
nario de la zona tropical de Los Andes, que
liza por vía nasal, por mucosas (boca o
genitales) y se puede diluir para inyección.
• “Speed- ball”: mezcla de cocaína y heroí-
crece en regiones cálidas y húmedas entre na para inyección intravenosa.
600-1500 m sobre el nivel del mar. El conteni- • “Crack”: Mezcla de pasta de cocaína con
do en cocaína de las hojas secas varía entre amoníaco y bicarbonato de sodio que pro-
5-12 g por kg de hojas. De una hectárea de duce cristales. Se fuma en pipas y se aspira
coca se pueden obtener hasta 250 kg de ho- el vapor. Es severamente tóxica y adictiva.
jas, 1250 g de pasta de coca y 500 g de clor- • “Crack C”: mezcla de crack con alucinó-
hidrato de cocaína (comercializable). genos.

La accidentalidad y violencia por el uso de co-


caína, aunque es menor que la asociada al al- MECANISMO DE ACCIÓN
cohol, continúa siendo alta. Los arrestos por
violencia (lesiones personales y robo) se aso- La cocaína se comporta como una amina sim-
cian en 75% al uso de sustancias en el mo- paticomimética de acción indirecta, es decir,
mento de cometer el crimen, principalmente remeda las acciones de las catecolaminas. No
alcohol, heroína, cocaína, bazuco y crack. 25- actúa directamente sobre los receptores adre-
40% de todos los ingresos hospitalarios está nérgicos o dopaminérgicos, sino aumentando
relacionado con abuso de esas sustancias. la disponibilidad del neurotransmisor en la
hendidura sináptica.
Las presentaciones de la cocaína incluyen:
• Hojas de coca: absorción variable, poco Es un inhibidor de los procesos de recaptación
uso. tipo I (recaptación de noradrenalina y dopami-
• Pasta de coca, base de cocaína o “bazuco”: na desde la hendidura sináptica hasta la ter-
se creó por los altos costos de la purifica- minal presináptica). El exceso de noradrenali-
ción de la cocaína. Se obtiene de la mace- na es el responsable de la mayoría de los efec-
ración de las hojas con ácido sulfúrico u tos farmacológicos y de las complicaciones
otros productos químicos alcalinos. Se agudas de la cocaína (hipertensión arterial,
fuma. midriasis, temblor). La cocaína también blo-
• Clorhidrato de cocaína: es la sal de la co- quea la recaptación de la serotonina y el con-
caína formada con ácido clorhídrico. Se uti- sumo crónico produce reducción de la biodis-

1266
CAPÍTULO VI: INTOXICACIÓN POR COCAÍNA

ponibilidad de ésta, lo que induce depresión temperatura. Se puede acompañar inclu-


crónica, con riesgo suicida al suspender la co- so de convulsiones.
caína. El aumento de la biodisponibilidad de 3. Sistema nervioso central: es un potente
dopamina, inhibe su recaptación, genera la estimulante del SNC, aunque estos efec-
euforia de la cocaína y está implicada en su tos varían de un individuo a otro de acuer-
mecanismo adictivo. do con la dosis utilizada. Dosis moderadas
producen elevación del estado de ánimo,
sensación de mayor energía y lucidez, dis-
FARMACOCINÉTICA minución del apetito, insomnio, mayor ren-
dimiento en la realización de tareas, dismi-
La cocaína se absorbe por todas las vías de nución de la fatiga, hiperactividad verbal,
administración. Alcanza rápidamente altas motora e ideativa. Cuando cesa el efecto
concentraciones plasmáticas. Atraviesa la agudo, se genera una sensación de can-
barrera hemato-encefálica. Cuando es aspi- sancio y fatiga sumado a disforia. Se des-
rada o inyectada en forma intravenosa alcan- criben, igualmente, alteraciones en la per-
za niveles en el SNC a los 30 segundos. Se cepción, en la capacidad crítica y discrimi-
distribuye rápidamente por todo el organismo. nativa, pseudoalucinaciones táctiles (“bi-
chos en la piel”), auditivas (críticas), visua-
Es metabolizada por las colinesterasas plas- les, pánico, conducta estereotipada, bru-
máticas y hepáticas que hidrolizan cada uno xismo y movimientos compulsivos.
de sus grupos ésteres para producir benzoilec-
gonina. Un pequeño porcentaje se elimina tras
la acción de las mono-oxigenasas, que produ- INTOXICACIÓN AGUDA
cen metabolitos reactivos que actúan como
radicales libres. El alcohol induce la activa- Está dada por manifestaciones de hiperactivi-
ción de la enzima carboxilesterasa, que con- dad noradrenérgica y dopaminérgica, que
vierte la cocaína en etil-cocaína, un metabolito afecta diferentes órganos y sistemas. Los más
activo que aumenta la cardiotoxicidad. Se pue- comunes son:
den detectar metabolitos en orina hasta 24
horas o algunos días después de una dosis. 1. Aparato cardiovascular: palpitaciones,
taquicardia, arritmias, hipertensión, infarto
agudo del miocardio (IAM), espasmo cere-
EFECTOS brovascular, hemorragia cerebral, vaso-
constricción periférica, coagulación intra-
1. Sistema nervioso simpático y aparato vascular diseminada (CID), disección
cardiovascular: al estimular los recepto- aórtica, muerte súbita.
res alfa y beta adrenérgicos se produce 2. Aparato respiratorio: taquipnea, respira-
vasoconstricción, aumento de la presión ción irregular, paro respiratorio.
arterial, taquicardia, midriasis, temblor, pa- 3. Aparato digestivo: anorexia, náuseas,
lidez y sudoración. diarrea, vómito.
2. Temperatura corporal: hay aumento de 4. Metabolismo: hipertermia con sudoración
la producción de calor por incremento de y acidosis láctica. Altas dosis producen hi-
la actividad muscular y de la disminución pertermia.
de la pérdida del control dopaminérgico de 5. Ojo: midriasis, vasoconstricción conjunti-
receptores hipotalámicos reguladores de val, nistagmus vertical.

1267
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

6. Sistema nervioso central: luego del epi- • E: Eye-opener. Necesidad de consumo


sodio de euforia aparece ansiedad, confu- durante el día para sentirse bien.
sión, irritabilidad, alucinaciones visuales y La presencia de una respuesta afirmativa
táctiles, alteraciones en la percepción, re- supone riesgo de adicción, mientras que
acciones paranoides y convulsiones tóni- dos o más son adicción confirmada.
co-clónicas generalizadas. 2. Examen físico: ya se revisaron los signos
7. A largo plazo (algunos meses) produce de- físicos que puede presentar un paciente
pendencia psíquica, y su suspensión pro- intoxicado por cocaína.
duce un síndrome de abstinencia psíquico 3. ECG: Fundamental para cualquier pacien-
de enormes repercusiones con “craving” te con o sin dolor torácico.
(compulsión de consumo) casi intolerable. 4. Radiografía de tórax: debe practicarse en
8. Como consecuencia del consumo de cocaí- cualquier paciente con dolor torácico en
na, se relajan las inhibiciones sanas gene- quien se sospeche neumotórax y en fuma-
rando conductas sexuales riesgosas e in- dores de bazuco para evidenciar cambios
discriminadas, con riesgo de contraer HIV y sugestivos de EPOC.
otras enfermedades de transmisión sexual. 5. Otros estudios útiles de acuerdo con la
9. Muerte: incluso con la primera dosis. Las severidad del cuadro clínico son:
causas de muerte son: arritmia, infarto agu- • Electrolitos.
do del miocardio (IAM), status epiléptico, • Glicemia.
hemorragia intracraneana, hipertermia. • Creatinina y BUN.
10.Otras: neumotórax, neumomediastino, le- • CPK, CK fracción MB y troponina si está
siones del tabique nasal. disponible.
• Uroanálisis.
• TAC de cráneo o resonancia nuclear
DIAGNÓSTICO magnética (RNM) si se sospecha hemo-
rragia o infarto cerebral.
1. Historia clínica y anamnesis: todos los • Monitorización al menos por 6 horas de
pacientes con síntomas sugestivos de in- actividad cardíaca y presión arterial.
toxicación por cocaína deben ser interroga- 6. Niveles específicos: no es de mayor utili-
dos acerca del uso reciente o habitual, ca- dad medir niveles cuantitativos de cocaína
racterísticas, dosis, síntomas. Por supuesto puesto que la toxicidad, aunque sí depen-
deben ser interrogados específicamente de de la dosis, también depende de la to-
sobre uso o abuso de otras drogas psico- lerancia del paciente. Se utilizan pruebas
activas. El paciente generalmente no rela- de detección rápida en orina, que miden el
ta espontáneamente la causa de sus sín- metabolito benzoilecgonina. Estas pruebas
tomas y, por lo tanto, debe ser el médico son de fácil consecución y muy económi-
quien pregunte. El interrogatorio debe in- cas. Su resultado se obtiene en menos de
cluir el cuestionario CAGE para diagnósti- 20 minutos y pueden ser manejadas por el
co de adicciones, a saber: laboratorio o en el área de urgencias.
• C: Cut-down. Reflexiones personales
sobre posible abuso.
TRATAMIENTO INICIAL
• A: Annoyed. Comentarios de terceros
con relación al hábito de consumo. 1. Medidas de soporte de emergencia: (Ver
• G: Guilty. Presencia de sentimientos de capítulo de enfoque general de las intoxica-
culpa. ciones agudas).

1268
CAPÍTULO VI: INTOXICACIÓN POR COCAÍNA

• Mantener vía aérea permeable y adminis- dores puros como esmolol, propranolol o
trar ventilación si es necesario. metoprolol porque, al bloquear únicamen-
• Agitación, exaltación del ánimo, hiperten- te los receptores beta, producen aumento
sión y taquicardia: tener acceso venoso pa- paradójico de la presión arterial, continuan-
ra hidratación y administrar benzodiaze- do el riesgo de arritmias por no estar cu-
pinas en dosis bajas hasta lograr remisión biertos los receptores alfa. En caso de no
de los síntomas. disponer de carvedilol o labetalol, adminis-
• Convulsiones y coma: utilizar oxígeno, ase- trar un betabloqueador junto con clonidina.
gurar vía aérea, acceso venoso con solu- 2. Descontaminación: No es necesaria des-
ción salina normal y administrar diazepam pués de la aspiración nasal, ni cuando la
en dosis de 5-10 mg. Posteriormente eva- vía de administración fue parenteral o por
luar etiología de las convulsiones y el coma inhalación. En caso de ingestión-volunta-
(TAC, RNM). ria o accidental- se recomienda lo siguiente:
• Monitorización de signos vitales y ECG por • Prehospitalario: no inducir vómito por el
un período de seis horas. Todo paciente riesgo de ACV o convulsiones. Adminis-
con sospecha de síndrome coronario agu- trar carbón activado 1 gr/kg.
do o disección aórtica debe ser admitido a • Hospitalario: administrar carbón activa-
una unidad de cuidados coronarios, o, si do a las mismas dosis (1 g/kg por dosis).
no se dispone de ésta, ser vigilado con mo- • En caso de ingesta y rotura de paque-
nitoria hasta la resolución de los síntomas tes de droga (“mula”): administrar dosis
o hasta lograr la remisión a institución de repetidas de carbón activado y conside-
tercer nivel. rar la irrigación intestinal con enemas de
• Síndrome coronario agudo: el paciente de- Nulytely o Colyte. Si hay riesgo de muer-
be ser tratado con nitritos (nitroglicerina a te, considerar el retiro quirúrgico.
dosis de 0,125 mcg/kg), aspirina, oxígeno • No existen medidas que aumenten la eli-
y reposo con monitoria continua. El uso de minación de la cocaína, dados su rápi-
la trombolisis es controversial, puesto que da distribución y metabolismo. Ni la he-
generalmente es desencadenado por vaso- modiálisis ni la hemoperfusión son úti-
espasmo y el cuadro se resuelve con vaso- les y el uso de acidificar la orina puede
dilatadores. En caso de pacientes con sos- incluso aumentar el riesgo de producir
pecha de enfermedad coronaria de base, mioglobinuria.
el manejo debe hacerse como cualquier
síndrome coronario agudo. En caso de va-
soespasmo se puede considerar la admi- TRATAMIENTO
nistración de calcio-antagonistas (diltia- INTERDISCIPLINARIO
zem) por algunos días después de la in-
toxicación, por la posibilidad de vasoespas- Todo paciente con intoxicación moderada a
mo recurrente. severa debe ser hospitalizado para evaluar la
• Emergencia hipertensiva: no asociada a evolución de la toxicidad y prevenir complica-
vasoespasmo coronario o infarto agudo del ciones. Los pacientes con alteración de órga-
miocardio: administrar UNICAMENTE blo- no vital deben ser admitidos a una unidad de
queadores de los receptores y como cuidado intensivo o intermedio. En caso de
labetalol oral o IV (1-2 mg/min), o carvedilol, presentarse complicación cardiovascular ma-
dosificados según la respuesta del pacien- nejar el paciente en conjunto con Cardiología
te. NO deben administrarse beta bloquea- o cirugía cardiovascular. Si el paciente ha

1269
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

presentado alteración neurológica temporal o brindándole tratamiento, tanto a él como a


definitiva hacerlo en conjunto con Neurología. su familia.
Todo paciente a quien, a través del cuestiona- 3. Prevención terciaria: comprende el trata-
rio CAGE para adicciones, se le diagnostique miento y la rehabilitación de los pacientes
adicción, debe ser intervenido tanto por el mé- con dependencia ya establecida y tácticas
dico tratante como por el servicio de psiquia- encaminadas a evitar las recaídas y esta-
tría y, de acuerdo a la severidad de su adic- blecer tratamientos definitivos que lleven a
ción, definir tratamiento ambulatorio o remi- la cura.
sión a institución especializada en el trata-
miento de la misma.
LECTURAS RECOMENDADAS

PRONÓSTICO 1. Angell M, Kassirer JP. Alcohol and other drugs


toward a more rational and consistent policy. N
El pronóstico de la intoxicación por cocaína Engl J Med 1994; 331:537-539.
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El pronóstico del abuso de sustancias depen- Detection of acute alcohol intoxication and chronic
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Patterns of alcohol and drug abuse in an urban
trauma center: the increasing role of cocaine abu-
ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN
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screening in urban trauma patients: drug
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prevalence and its relationship to trauma severity
identificación temprana del consumidor and management. J Trauma 1989; 29:1647-1653.

1270
CAPÍTULO VII: INTOXICACIÓN POR PLAGUICIDAS INHIBIDORES DE COLINESTERASAS

CAPÍTULO VII

Intoxicación por plaguicidas inhibidores


de colinesterasas
Uvier Gómez, MD
Departamento de Toxicología
Universidad de Antioquia

L os inhibidores de colinesterasas son un


grupo de plaguicidas que incluyen los
organofosforados y los carbamatos y que se
acumulación excesiva y por ende la sobreesti-
mulación de los receptores colinérgicos.

disuelven en hidrocarburos del tipo kerosene.


Algunos de los organofosforados tienen olor DOSIS TÓXICA
aliáceo.
La dosis tóxica de los inhibidores de colineste-
rasas es ampliamente variable. La intoxicación
MECANISMO DE TOXICIDAD por vía oral puede ser agravada por el suminis-
tro de aceite o leche, debido a que las sustan-
La acetilcolina es uno de los principales neuro- cias liposolubles aumentan la absorción de
trasmisores del organismo, ligando de los re- éstos pesticidas. La gravedad de la intoxica-
ceptores muscarínicos, nicotínicos y otros del ción cambia también si la exposición es agu-
sistema nervioso central. Cuando la acetilco- da o crónica agudizada.
lina se libera es rápidamente hidrolizada por
la enzima colinesterasa. Los organosforados
inhiben irreversiblemente la enzima colineste- VÍA DE ADMINISTRACIÓN
rasa y los carbamatos la inhiben de forma re-
versible; esta inhibición impide la degradación Estas sustancias ingresan al organismo por
del neurotrasmisor acetilcolina, favorece su vías oral, dérmica, inhalatoria o parenteral.

CUADRO CLÍNICO
Sintomatología aguda
MUSCARÍNICA NICOTÍNICA SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
Miosis Taquicardia Agitación
Diaforesis y sialorrea Hipertensión Confusión
Broncorrea y broncoespasmo Midriasis Delirio
Náuseas y vómito Fasciculaciones Convulsiones
Bradicardia Hipotonía Coma
Hipotensión Calambres Depresión respiratoria
Cólico y diarrea
Incontinencia urinaria

1271
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Las manifestaciones de toxicidad más comu- trica. A la sonda se le deben ampliar los
nes en los adultos son: bradicardia, hipoten- orificios laterales distales, empleando para
sión, miosis y broncorrea; en los niños, a dife- tal efecto una hoja de bisturí caliente, a fin
rencia de los adultos, puede haber pocos sín- de garantizar orificios de bordes romos y
tomas muscarínicos y predominio de los sín- atraumáticos. Si el paciente está muy bra-
tomas nicotínicos (hipertensión, taquicardia, dicárdico, se debe aplicar atropina antes
y midriasis), con depresión del sistema ner- del paso de la sonda, debido a que el estí-
vioso central, hipotonía, broncorrea y convul- mulo vagal puede aumentar la bradicardia.
siones. La primera muestra de contenido gástrico
debe guardarse en frasco con tapa de ros-
Cuando el paciente se estabiliza y en especial ca, para análisis toxicológico.
durante las primeras 12 a 72 horas, se deben 5. Inmovilizar al paciente colocándolo en de-
vigilar de cerca la frecuencia respiratoria, la cúbito lateral izquierdo para minimizar la
fuerza muscular del cuello y extremidades y posibilidad de reflujo gastroesofágico. Co-
el reflejo tusígeno. La aparición de disnea pro- locar en posición de Trendelemburg con 15
gresiva, tos débil, paresia, sobre todo si ade- grados de inclinación cefálica, a fin de que
más hay compromiso de cualquier par cra- si presenta emesis, se prevenga la neu-
neano motor, predicen la aparición del deno- monía por aspiración.
minado Síndrome Intermedio o Falla Respi- 6. Lavado gástrico con agua bicarbonatada
ratoria aguda Inducida por Organofosforados. al 3% en cantidad de 10 mL/kg de peso
por cada vez. El lavado debe repetirse has-
ta obtener el agua de retorno clara y sin
TRATAMIENTO olor, lo que requiere en general un volumen
de 5 a 10 litros. El volumen recuperado de
1. Realizar el ABCD (ATLS del Colegio Ame- la solución, debe ser equivalente a la can-
ricano de Cirujanos) con énfasis en la as- tidad suministrada.
piración de secreciones y la oxigenación. 7. Administrar carbón activado, 1 gramo por
2. Baño corporal con agua tibia y jabón, inclu- kilogramo de peso corporal. El volumen de
yendo cabello, uñas, región periumbilical e agua empleada como solvente se obtiene
inguinal, retirando y desechando la ropa con- multiplicando por 4 los gramos totales de
taminada. El personal de salud se debe pro- carbón. Este procedimiento permite obte-
teger con guantes y monogafas. Para lograr ner una suspensión al 25% para pasar por
descontaminación óptima, el baño debe ser la sonda orogástrica. Se repite la dosis de
complementado con la aplicación de alco- 1 gramo/kilogramo de peso, cada 6 horas
hol antiséptico y enseguida un nuevo baño durante las primeras 24 horas (Anon 1997).
con agua y jabón (Fredriksson 1961). Si hay 8. Suministrar catártico osmótico tipo manitol
contaminación del cabello con el plaguicida, al 20%, 1 g/kg (5 mL/kg VO) en dosis úni-
lavarlo como mínimo tres veces con abun- ca, o en su defecto catártico salino (sulfato
dante jabón y agua bicarbonatada al 3%. de magnesio en Sal de Epsom ®) 250 mg/
3. Canalización de vena con catéter y admi- kg de peso en niños y 500 mg/kg en adul-
nistración de líquidos endovenosos según tos, en solución al 25%. El catártico se re-
necesidad. pite únicamente si después de 4 horas el
4. Pasar sonda gástrica. Se debe emplear una paciente no ha presentado deposición. En
sonda gruesa (32 a 40 French en adultos niños pueden administrarse 3 ml de Leche
o 24 a 32 French en niños) por vía orogás- de Magnesia por cada 10 kilos de peso.

1272
CAPÍTULO VII: INTOXICACIÓN POR PLAGUICIDAS INHIBIDORES DE COLINESTERASAS

9. Difenhidramina: 1 a 2 mg por kilogramo de prepara agregando 1 cc/kg de bicarbona-


peso IV directo, sin exceder 50 mg, cada 8 to, diluido en solución salina en una propor-
horas durante 3 días (Mohammed et al ción de 1:3 para pasar la mitad en una hora
1989; Córdoba 2002). Si la presentación y el resto en 3 horas, controlando el pH
parenteral no está disponible, administrar con determinación de gases arteriales. El
la misma dosis por vía oral, dos horas des- empleo de la tirilla urinaria para mantener
pués de haber suministrado el carbón acti- el pH urinario entre 7 y un máximo de 8,
vado. Debe tenerse presente que éste me- puede ser ayuda de laboratorio valiosa, en
dicamento puede aumentar la prolongación especial cuando no se pueden medir los
del intervalo QTc inducido por organofos- gases arteriales.
forados. 13.Nebulizaciones con bromuro de ipratropio,
10.Atropina: iniciar con un bolo IV directo rá- 0,5 mg cada 6 horas; en niños 2 inhalacio-
pido de 1 a 2 mg en adultos ó 0,05 mg/kg nes con espaciador, cada 20 minutos en la
en niños, evaluando la respuesta cada 5 primera hora y luego cada 4 a 6 horas
minutos y ajustando la dosis hasta obtener (Shemesh et al 1988).
los signos de atropinización: taquicardia, 14.Electrocardiograma. Los pacientes con pro-
desaparición de la broncorrea (Golsousidis longación del QTc están más predispues-
& Kokkas 1985) y piel seca, rubicunda y tos a desarrollar falla respiratoria aguda y
caliente. La midriasis no es un signo confia- arritmias (taquicardia ventricular polimorfa
ble de atropinización, ya que su aparición o “torsades de pointes”) y tienen un pronós-
no es constante. Sólo cuando el paciente tico peor que los pacientes con intervalo
esté atropinizado y en intoxicaciones gra- QTc normal (Chuang et al 1996; Jang et al
ves se puede considerar la infusión de atro- 1995). Si el intervalo QTc corregido está
pina, 0,02 a 0,08 mg/kg/hora, evitando que prolongado, administrar sulfato de magne-
la frecuencia cardíaca sobrepase el valor sio 2 ampollas disueltas en 100 ml de so-
máximo para la edad. Nunca debe suspen- lución salina, para pasar en una hora y en
derse la infusión abruptamente ni en un niños 50 mg/kg en 20 minutos, repitiendo
lapso inferior a 24 horas, porque se pueden la dosis cada 8 horas.
presentar bradiarritmias mortales (Bardin 15.Radiografías PA y lateral de tórax para des-
et al 1987). cartar neumonía aspirativa. En caso de
11. Pralidoxima (Protopam®): se debe adminis- confirmarse el problema, administrar clin-
trar a los pacientes gravemente intoxicados damicina 600 mg IV cada 6 horas en adul-
por organofosforados, en dosis de 25-50 mg/ tos o 25 a 40 mg/kg/día en los niños, divi-
kg durante 30 minutos, seguido por goteo dido en cuatro dosis, pero si el QTc está
de 9 a 19 mg/kg/hora según respuesta, al por encima de 500 miliseg debe conside-
menos durante 24 horas. El uso de pralido- rarse alternativas tales como la penicilina
xima en la intoxicación por carbamatos se cristalina o sulbactam/ampicilina.
ha puesto en duda y sólo se debe conside- 16.Diazepam en caso de convulsiones, en
rar su administración en caso de intoxica- dosis de 0,2 a 0,5 mg/kg, repitiendo la do-
ción mixta por carbamatos y organofosfo- sis cada 5 minutos si es necesario. Si se
rados (Amos & Hall 1965; Namba et al 1971; presenta status convulsivo se debe consi-
Borowitz 1988; de Kurt et al 1988). derar la utilización de difenilhidantoína 15
12.En los pacientes graves se debe suminis- a 20 miligramos por kilogramo en solución
trar bicarbonato de sodio parenteral a la salina, IV, a una velocidad de infusión de
dosis de 1 mEq/kg. La mezcla sugerida se 0,5 mg/kg/min.

1273
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

17.Ventilación mecánica si el paciente presen- gation indicates a poor prognosis in patients with
ta Síndrome Intermedio. organophosphate poisoning. Am J Emerg Med
18.No dar salida del hospital antes de un pe- 1996; 14:451-453.
9. Chung K, Yang CC, Wu ML, Deng JF, Tsai WJ.
riodo asintomático de 24 horas.
Agricultural avermectins: an uncommon but
19.Evaluación por psiquiatra aún en las intoxi- potentially fatal cause of pesticide poisoning. Ann
caciones accidentales, debido a que la in- Emerg Med 1999; 34:51-57.
toxicación por organofosforados genera se- 10. Córdoba, D. Toxicología. 3a impresión. Impresio-
cuelas cognitivas y cuadros depresivos. nes Vieco e hijas, Medellín, 2001.
11. Ellenhorn, M. Medical Toxicology Diagnosis and
Treatment of Human Poisoning. Second Edition.
Williams & Wilkins. Baltimore, 1997.
LABORATORIO 12. Fredriksson T. Percutaneous absorption of para-
thion and paraoxon. Arch Environ Health 1961;
Tomar muestra de sangre en tubo heparinizado 3:67-70.
para determinación de colinesterasas plasmá- 13. Goldfrank LR, Flomenbaum NE, Lewin NA et al:
ticas y eritrocitarias (una décima de heparina Goldfrank’s Toxicologic Emergencies, 3rd ed.
por cada 3 mL de sangre). Ionograma con Mg, Appleton-Century-Crofts, Norwalk, 1986.
y amilasas séricas. Niveles de amilasas supe- 14. Golsousidis H, Kokkas V. Use of 19,590 mg of
riores a 360 UI se correlacionan con intoxica- atropine during 24 days of treatment, after a case
ción grave y aparición de Síndrome Intermedio. of unusually severe parathion poisoning. Human
Toxicol 1985; 4:339-340.
15. Haddad LM & Winchester JF. Clinical Management
of Poisonings and Drug Overdose. WB Saunders
LECTURAS RECOMENDADAS Company, Philadelphia, 1983.
16. Jang SW, Lin JL, Chuang FR. Electrocardiographic
1. Anon: Position Statement: gastric lavage. Ame- findings of organophosphorous intoxication in
rican Academy of Clinical Toxicology/European emergency department as predictors of prognosis:
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Toxicologists. Clin Toxicol 1997; 35:711-719. Gung. Med J 1995; 18:120-125.
2. Amos WC Jr & Hall A: Malathion poisoning treated 17. Kurt TL. Letters to the editor. Vet Human Toxicol
with protopam. Ann Intern Med 1965; 62:1013-1016. 1988; 30:268-269.
3. Bardin PG, Van Eeden SF, Joubert JR. Intensive 18. Lee P, Tai DY. Clinical features of patients with
care management of acute organophosphate acute organophosphate poisoning requiring inten-
poisoning. A 7-year experience in the western sive care. Intensive Care Med 2001; 27:694-699.
Cape. S Afr Med J 1987; 72:593-597. 19. Mohammad FK, Al-Kassim NA & Abdul-Latif AR:
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pesticide intoxication: five cases. Neurology 1999; 95.
52:1467-1471. 20. Namba T, Nolte CT & Jackrel J: Poisoning due to
5. Borowitz SM. Prolonged organophosphate toxicity organophosphate insecticides. Acute and chronic
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Co. New York, 1991 22. Sungur M, Guven M. Intensive care management
7. Centers for Disease Control and Prevention. Noso- of organophosphate insecticide poisoning. Crit
comial poisoning associated with emergency Care 2001; 5:211-215.
department treatment of organophosphate 23. Shemesh I, Bourvin A, Gold D et al: Chlorpyrifos
toxicity—Georgia, 2000. JAMA 2001; 285:527-528. poisoning treated with ipratropium and dantrolene:
8. Chuang FR, Jang SW, Lin JL et al. QTc prolon- a case report. Clin Toxicol 1988; 26:495-498.

1274
CAPÍTULO VIII: INTOXICACIÓN POR BENZODIACEPINAS

CAPÍTULO VIII

Intoxicación por benzodiacepinas

Uvier Gómez, MD
Departamento de Toxicología
Facultad de Medicina
Universidad de Antioquia

L as benzodiacepinas son medicamentos de


amplio uso con propiedades ansiolíticas,
hipnóticas y sedantes. Su potencia, duración
etanol o antipsicóticos, potencializa el efecto
depresor sobre la respiración y la conciencia.

y metabolismo son variables. Las muertes de-


bido a benzodiacepinas por vía oral son ex- MANIFESTACIONES CLÍNICAS
tremadamente raras, a no ser que se ingieran
al tiempo con otros fármacos como barbitúri- Los síntomas de depresión del sistema ner-
cos, etanol y antidepresivos. vioso central (SNC) suelen iniciarse rápida-
mente por vía venosa, o a los 30–120 minutos
por vía oral, dependiendo del compuesto. Los
MECANISMO DE TOXICIDAD síntomas más comunes son sedación, ataxia,
somnolencia, disartria, nistagmus y pupilas
Las benzodiacepinas potencian la acción mióticas o intermedias. Puede haber además
inhibitoria del neurotransmisor ácido gaba hiporreflexia, hipotermia e hipotensión con ta-
amino butírico (GABA), favoreciendo el ingre- quicardia compensatoria. La náusea y el vómi-
so de iones de cloro a la célula, lo cual gene- to son más comunes en los niños. La aparición
ra hiperpolarización celular y disminuye la de coma debe hacer sospechar la coinges-
excitabilidad neuronal. tión de otros depresores. Ocasionalmente
pueden observarse algunos efectos para-
DOSIS TÓXICA dójicos como agresión, excitación, psicosis o
deterioro neurológico importante, siendo an-
En general el nivel de toxicidad para las cianos y niños más susceptibles a este tipo
benzodiacepinas es muy alto. Los efectos de de manifestaciones. La inmovilidad prolonga-
la sobredosis por vía oral son leves o mode- da por inconciencia puede generar rabdomió-
rados. Se han descrito ingestiones de dia- lisis o escaras. Muy ocasionalmente el com-
zepam de 15–20 veces la dosis terapéutica promiso respiratorio desencadena hipoxia y
sin presentarse deterioro importante de la con- acidemia secundaria.
ciencia; sin embargo, la administración intrave-
nosa rápida, aun en dosis terapéuticas, pue-
de inducir paro respiratorio, posiblemente de- EXÁMENES PARACLÍNICOS
bido en parte al vehículo de la ampolla (pro-
pilenglicol). La coingestión de benzodiacepi- Debe solicitarse la prueba rápida cualitativa
nas con otras sustancias sedantes, hipnóticas, para benzodiacepinas en orina o el examen

1275
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cuantitativo, teniendo en cuenta que los nive- máximo total de 30 g, en solución al 25%.
les urinarios se correlacionan pobremente con Puede utilizarse como alternativa manitol
la clínica. al 20% en dosis de 1 g/kg por vía oral (5
mL/kg). El catártico se suministra en dosis
En algunos casos puede ser necesario la toma única luego de la primera dosis de carbón
de ionograma, BUN y creatinina para descar- activado y sólo se repite si en las siguien-
tar causas diferentes a las tóxicas que compro- tes cuatro horas no hay deposiciones. Nun-
metan el estado de conciencia. Si se sospecha ca se debe administrar otra dosis de car-
hipoxemia se debe ordenar oximetría de pul- bón si no se ha logrado catarsis efectiva,
so o gases arteriales. La glicemia es manda- puesto que su acción constipante es
toria para descartar hipoglicemia como parte potencializada por el efecto anticolinérgico
del diagnóstico diferencial en un paciente con de las benzodiacepinas y puede presen-
deterioro neurológico. El citoquímico de orina tarse obstrucción intestinal.
y la CPK son de utilidad para evaluar rabdo- 7. Oxigeno suplementario, según la condición
miólisis cuando el paciente está en estado de del paciente.
coma. 8. Los diuréticos no aumentan la velocidad de
eliminación de las benzodiacepinas, por lo
La tomografía axial computadorizada (TAC) que su empleo con tal fin no está justifica-
de cráneo, punción lumbar y radiografía de do.
tórax se indican si se sospechan complicacio- 9. El flumazenil (Lanexat®) en ampollas de 5
nes pulmonares u otras causas de depresión mL (0,1 mg/mL) es el antídoto específico
del SNC. para la intoxicación por benzodiacepinas y
su uso debe restringirse a casos seleccio-
nados, tales como:
TRATAMIENTO • Pacientes con sedación profunda.
• Pacientes con depresión respiratoria.
1. No inducir el vómito, pues no ha demos- • Pacientes en coma.
trado utilidad y está absolutamente contra- Luego de aplicado el flumazenil sus efec-
indicada en pacientes con algún grado de tos se inician en 1-2 minutos y persisten
deterioro neurológico por el riesgo de durante 1-5 horas dependiendo de la can-
broncoaspiración. tidad y el tipo de benzodiacepina ingerida.
2. Suspender la vía oral hasta que el pacien- La dosis inicial es de 0,2mg IV (0,01mg/kg
te esté consciente. en niños), y en caso de no obtenerse res-
3. Intubación orotraqueal, según el estado puesta se suministran bolos de 0,3 mg,
neurológico, antes de iniciar la desconta- hasta un máximo de 3 mg en adultos y 1
minación del tracto gastrointestinal. mg en niños. Si con esta dosis no ha rever-
4. Lavado gástrico en pacientes que consul- tido la sedación pueden descartarse las
ten dentro de la hora siguiente a la intoxica- benzodiacepinas como causa de la intoxi-
ción y conserven intacto el reflejo nauseoso cación.
y tusígeno o tengan intubación orotraqueal. Se contraindica la administración de fluma-
5. Carbón activado 1 g/kg de peso, en solu- zenil en pacientes con convulsiones, de-
ción al 25%, vía oral, cada ocho horas du- pendencia a benzodiacepinas, intoxicación
rante 24 horas. concomitante con cocaína, hidrato de cloral
6. Suministrar catártico: sulfato de magnesio o antidepresivos tricíclicos. El empleo de
(Sal de Epsom®) 250 mg /kg, hasta un flumazenil requiere de la toma de un elec-

1276
CAPÍTULO VIII: INTOXICACIÓN POR BENZODIACEPINAS

trocardiograma previo para descartar intoxi- 11.Si se presenta hipotensión que no mejora
cación concomitante por antidepresivos con la administración de solución salina al
tricíclicos. El hallazgo de onda S > R en la 0,9%, administrar dopamina 2-5 mcgr/kg/
derivación I, R en aVR o ensanchamiento min, titulando hasta obtener el efecto de-
del QRS mayor de 100 mseg, es compati- seado. Es poco probable que dosis supe-
ble con intoxicación por tricíclicos y pros- riores a 20 mcgr/kg tengan algún beneficio.
cribe el empleo del flumazenil.
10.En caso de no contar con flumazenil, la me-
dicación alternativa es la aminofilina (am- LECTURAS RECOMENDADAS
pollas de 240 mg/5 mL) administrada en
bolo IV de 6 mg/kg disuelta en 30 mL de 1. Goldfrank L, Flomenbaum N, Lewin N, et al.
DAD o solución salina, para pasar en 30 Goldfrank´s Toxicologic Emergencies. Seventh
minutos, disminuyendo la dosis de carga a edition. McGraw-Hill. New York, 2002.
2. Olson Kent R. Poisoning and drug overdose. Third
la mitad si el paciente es mayor de 60 años,
edition. Appleton and Lange. Norwalk, 1999.
si no está adecuadamente oxigenado o 3. Klaasen C, Dull J. Casarett and Doull’s Toxicology:
presenta enfermedad hepática o cardiaca. The Basic Science of Poisons. 6 th Edition.
La dosis de mantenimiento es variable se- McGraw-Hill. New York, 2001.
gún el paciente así: niños 1 mg/kg/hora, 4. Haddad LM, Shannon MW, Winchester JF. Clinical
adolescentes y adultos fumadores 0,8 mg/ management of poisoning and drug overdose. WB
kg/hora, adultos no fumadores 0,5 mg/kg/ Saunders Company. Third Edition. Philadelphia, 1999.
hora, mayores de 60 años 0,3 mg/kg/hora 5. Ellenhorn MJ. Diagnosis and treatment of human
poisoning. Second Edition Williams and Wilkins, 1997.
durante por lo menos 12-24 horas. Se debe
6. Marrosu F, Marchi A, De Mertino MR et al: Ami-
tener presente que la administración de nophylline antagonizes diazepam-induced anes-
aminofilina requiere la administración simul- thesia and EEG changes in humans. Psychophar-
tánea de oxígeno ya que es inhibidora de macology 1985; 85:69-70.
la adenosina y genera vasoconstricción 7. Stirt JH. Aminophylline as a diazepam antagonist.
coronaria. Anesth Anal 1981; 60:767-776.

1277
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IX

Intoxicación por antidepresivos tricíclicos

María Luisa Cárdenas, MD, MSc


Profesor Asistente de Farmacología
Universidad Nacional de Colombia

GENERALIDADES
Y EPIDEMIOLOGÍA

P or el frecuente antecedente de depresión


en los suicidas, los antidepresivos tricí-
clicos (ATC) son el grupo farmacológico más
En la revisión de protocolos de autopsia del
Instituto de Medicina Legal y Ciencias Foren-
ses, sede Bogotá, realizada por el Departa-
utilizado en los intentos de suicidio y, por tan- mento de Toxicología de la Facultad de Medi-
to, con el que se observa un mayor número cina de la Universidad Nacional de Colombia,
de muertes por sobredosis. entre 1996-2001 se reportaron seis casos de
muerte causada por antidepresivos tricíclicos.

CLASIFICACIÓN

TRICÍCLICOS HETEROCÍCLICOS INHIBIDORES DE SEROTONINA (ISRS)


Amitriptilina Alprazolam Fluoxetina
Clomipramina Amoxapina Fluvoxamina
Doxepina Maprotilina Paroxetina
Imipramina Mianserina Sertralina
Lofepramina Trazodona Venlafaxina
Nortriptilina Viloxazina Tianeptina
Trimipramina Ritanserina

FARMACODINAMIA • Inhibición de la recaptación de estos


neurotransmisores.
Los efectos terapéuticos de los ATC son muy
similares, pero su farmacología difiere consi- La concentración sérica pico de los ATC se
derablemente. Los mecanismos de acción que produce de dos a ocho horas después de la
explican sus efectos farmacológicos son dos: administración de una dosis terapéutica. En
caso de sobredosis, y debido al efecto anticoli-
• Bloqueo de receptores de histamina, dopa- nérgico de estas sustancias, se produce retar-
mina, serotonina y noradrenalina. do del vaciamiento gástrico y, por lo tanto,

1278
CAPÍTULO IX: INTOXICACIÓN POR ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS

retraso en la absorción del fármaco. Sin em- El mecanismo de afectación del sistema ner-
bargo, en la mayoría de los casos de intoxica- vioso central no se conoce bien, pero parece
ción, el cuadro clínico aparece rápidamente y que se debe a los efectos anticolinérgicos y
la mayoría de las muertes se produce en las antihistamínicos
primeras horas.

FARMACOCINÉTICA EFECTO SOBRE EL POTENCIAL DE ACCIÓN


DE LA CÉLULA CARDIACA
Los antidepresivos cíclicos tienen un volumen
de distribución grande (10-20 L/kg), y en algu- El efecto electrofisiológico más importante es
nos tejidos la concentración del fármaco es la inhibición de los canales rápidos de sodio
de 10-100 veces la concentración sanguínea. que retarda la fase 0 de despolarización de
La distribución hacia los tejidos es rápida y las fibras del haz de His, del haz de Purkinje y
menos de un 1-2% de la dosis ingerida está del miocardio ventricular. En el electrocardio-
presente en la sangre en las primeras horas grama, esto se traduce en prolongación del
tras la intoxicación. La vida media para las do- intervalo QRS, lo cual es característico de la
sis terapéuticas es de 8-30 horas, siendo algo sobredosis por antidepresivos policíclicos
mayor en los pacientes ancianos. (ADP).

La biotransformación de estos fármacos se El movimiento intracelular de sodio durante la


realiza casi por completo en el hígado. Des- fase 0 del potencial de acción está estrecha-
pués de una sobredosis, durante las primeras mente acoplado con la liberación del calcio
horas, la concentración de metabolitos activos intracelular almacenado. Por lo tanto, la alte-
es baja, pero estos metabolitos pueden au- ración de la entrada de sodio dentro de la célu-
mentar la toxicidad pasadas las primeras 12- la miocárdica puede alterar la contractilidad
24 horas. celular, lo que origina el efecto inotrópico
negativo.
Una pequeña cantidad, tanto de compuestos
originales como de metabolitos activos, es Otros efectos de los antidepresivos policíclicos
excretada por la bilis. sobre el potencial de acción de las células car-
diacas incluyen retardo de la fase 4 de la des-
polarización y de la repolarización, así como
MECANISMO DE TOXICIDAD DE una inhibición de los canales de calcio. La pro-
LOS ANTIDEPRESIVOS longación de la repolarización, y también del
intervalo QT, es característica tanto de las do-
Los efectos tóxicos más importantes son hipo- sis terapéuticas como de la intoxicación por
tensión, arritmias, coma, convulsiones e hiper- este grupo farmacológico, predisponiendo la
termia. La cardiotoxicidad se debe al efecto prolongación del QT al desarrollo de torsades
sobre el potencial de acción de la célula cardia- des pointes, descritas incluso en dosis tera-
ca, al efecto directo sobre el tono vascular y a péuticas.
un efecto indirecto mediado por el sistema ner-
vioso autónomo. La hipertermia se debe al RECAPTACIÓN DE LOS NEUROTRANSMISORES
aumento de la actividad muscular y del tono
anticolinérgico. A nivel neuronal estas sustancias producen
inhibición de la recaptación y aumento de los

1279
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

niveles de determinados neurotransmisores más frecuente en este tipo de intoxicación. Sin


(norepinefrina, dopamina, serotonina). embargo, puede ser difícil de distinguir de una
taquicardia sinusal con complejo QRS ancho
BLOQUEO COLINÉRGICO cuando las ondas P no son visibles. La taqui-
cardia ventricular se produce en pacientes con
El efecto anticolinérgico de los ADP contribuye una marcada prolongación del complejo QRS
al desarrollo de taquicardia sinusal, hiperter- e hipotensión y puede ser precipitada por la
mia, íleo, retención urinaria, dilatación pupilar aparición de convulsiones. Otros factores
y posiblemente coma. De éstos, el efecto más precipitantes pueden ser hipoxia, hipotermia,
importante es la hipertermia. acidosis y el uso de agonistas beta-1-adrenér-
gicos. La mortalidad en los pacientes con ta-
BLOQUEO ALFA ADRENÉRGICO quicardia ventricular es alta, ya que la fibrila-
ción se produce como complicación de la ta-
A dosis terapéuticas se produce bloqueo de quicardia ventricular y la hipotensión. La torsa-
los receptores alfa que da lugar a vasodila- de des pointes es poco frecuente y puede pro-
tación e hipotensión ortostática. En dosis tóxi- ducirse aún a dosis terapéuticas de algunos
ca, la vasodilatación arterial y venosa contri- ADP.
buyen a la hipotensión.
Arritmias tardías. La toxicidad de los antide-
presivos policíclicos generalmente desapare-
CUADRO CLÍNICO ce una vez transcurridas las primeras 24-48
horas, siendo mayor dentro de las primeras
SISTEMA CARDIOVASCULAR 24. Sin embargo, se han descrito casos de
arritmias o de muerte súbita que se producen
Alteraciones Electrocardiográficas. La pro- de dos a cinco días después de la ingestión.
longación del intervalo QRS es una de las al-
teraciones más características de la intoxica- Hipotensión. La hipotensión se produce por
ción grave por ADP. La morfología del com- disminución de la contractilidad miocárdica y
plejo QRS muestra un retraso inespecífico de vasodilatación.
la conducción intraventricular. El bloqueo de
rama derecha es menos frecuente. SISTEMA NERVIOSO CENTRAL (SNC)

Intervalo QT. El intervalo QT está ligeramen- Delirio. El mecanismo parece que es debido
te prolongado a las dosis terapéuticas de los al bloqueo colinérgico a nivel del SNC, por lo
ADP, siendo más prolongado en los casos de que puede acompañarse de otros signos
intoxicación. anticolinérgicos como hipertermia, sequedad
de piel, midriasis, taquicardia sinusal, íleo y
Taquicardia sinusal. Está presente en más retención urinaria.
de 50% de los pacientes intoxicados con ADP.
La taquicardia sinusal puede estar agravada Convulsiones y mioclonias. Las convulsio-
por hipoxia, hipotensión, hipertermia o el uso nes se producen con mayor frecuencia en las
de agonistas beta-1-adrenérgicos. primeras horas tras la ingestión y suelen ser
generalizadas, breves y remitir antes de que
Arritmias ventriculares. La taquicardia ven- se pueda administrar algún anticonvulsivante.
tricular es probablemente la arritmia ventricular Las convulsiones pueden conducir a hiperter-

1280
CAPÍTULO IX: INTOXICACIÓN POR ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS

mia severa, rabdomiólisis o falla multisisté- activado, 1 g/kg cada cuatro horas hasta que
mica. Las mioclonias son menos frecuentes despierte el paciente. No inducir el vómito por
que las convulsiones. el riesgo de broncoaspiración y de desenca-
denar convulsiones.
Hipertermia. La hipertermia es debida a la
producción excesiva de calor junto con alte- La hemodiálisis y la hemoperfusión no son
ración de la disipación del mismo por acción útiles para incrementar la eliminación, por te-
anticolinérgica (disminución de la sudoración). ner estos fármacos una alta unión a proteí-
La muerte o las secuelas neurológicas ocu- nas plasmáticas y un amplio volumen de dis-
rren en los pacientes intoxicados cuando la tribución.
temperatura corporal supera los 41ºC duran-
te varias horas. MANEJO DE COMPLICACIONES
ESPECÍFICAS
Otras manifestaciones. La retención urina-
ria y el íleo intestinal son frecuentes en la in- El paciente debe ser monitorizado permanen-
toxicación por bloqueo de los receptores coli- temente ante el riesgo de convulsiones, arrit-
nérgicos. El tamaño pupilar es variable, debi- mias y edema pulmonar no cardiogénico. Una
do a la doble influencia del bloqueo colinérgico vez superado el episodio de la intoxicación,
y de los receptores alfa. Las pupilas no reac- debe ser valorado por psiquiatría.
tivas a la luz han sido descritas en raras oca-
siones. En pacientes con prolongación del QRS o
hipotensión, administrar bicarbonato de sodio
en dosis de 1–2 mEq/kg IV; repetir si es ne-
AYUDAS DIAGNÓSTICAS cesario para mantener el pH en 7,45 – 7,55.

Son útiles los siguientes estudios y determi- La hiperventilación ayuda a mantener un me-
naciones: dio alcalino en pacientes que no toleran la
carga de bicarbonato de sodio. Es conveniente
• Electrocardiograma. inducirla concomitantemente con la adminis-
• Gases arteriales. tración del bicarbonato y no utilizarla en for-
• Electrolitos. ma prolongada porque puede inducir convul-
• Glicemia. siones.
• Creatinina.
• Creatinfosfoquinasa (CPK). MANEJO SINTOMÁTICO
• Niveles séricos de antidepresivos.
• Determinación cualitativa de antidepresivos Controlar la temperatura cada media hora con
tricíclicos en orina. medios físicos, aplicación externa de hielo o
lavado gástrico con agua helada.

TRATAMIENTO
PRONÓSTICO
TRATAMIENTO INICIAL
Superadas las primeras 24 horas sin que se
Debe dirigirse a disminuír la absorción con presenten complicaciones, el paciente muy
lavado gástrico y administración de carbón seguramente evolucionará favorablemente.

1281
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Tan pronto cedan los cambios electrocardio- el efecto farmacológico e incrementar la car-
gráficos se puede suspender la alcalinización, diotoxicidad.
manteniendo la monitorización cardiaca por
24 horas más. La muerte puede ocurrir pocas
horas después de la admisión y ocurre por LECTURAS RECOMENDADAS
fibrilación ventricular, shock cardiogénico o por
status epiléptico con hipertermia. La muerte 1. Ash SR. Treatment of severe tricyclic antidepre-
súbita, varios días después de la intoxicación, ssant overdose with extracorporeal sorbent deto-
xification. Adv Ren Replace Ther 2002; 9:31-41.
se produce ocasionalmente por tratamiento
2. Delva NJ, Hawken ER. Preventing lithium intoxi-
inadecuado y persistencia del efecto cardiotó- cation. Guide for physicians. Can Fam Physician
xico de los antidepresivos. 2001; 47:595-600.
3. Glauser J. Tricyclic antidepressant poisoning.
Cleve Clin J Med 2000; 67:704-706.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN 4. Mason PJ, Morris VA, Balcezak TJ. Serotonin
syndrome. Presentation of 2 cases and review of
the literature. Medicine 2000; 79:201-209.
Evitar el uso combinado con otros depresores
5. Singh N. Serial electrocardiographic changes as a
del SNC. predictor of ardiovascular toxicity in acute tricyclic
antidepressant overdose. Am J Ther 2002; 9:75-79.
No administrar simultáneamente con inhibido- 6. Teece C. Gastric lavage in tricyclic antidepressant
res de la mono-amino-oxidasa por potenciar overdose. Emerg Med J 2003; 20:64.

1282
CAPÍTULO X: INTOXICACIÓN POR OPIOIDES

CAPÍTULO X

Intoxicación por opioides

María Luisa Cárdenas, MD, MSc


Profesor Asistente de Farmacología
Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia

GENERALIDADES
Y EPIDEMIOLOGIA

S e denomina opiáceos u opioides al gru-


po de compuestos naturales derivados de
los jugos del Papaver somniferum, entre los
los compuestos sintéticos y semisintéticos
análogos de los opiáceos (Tabla No. 1).

cuales se cuentan la morfina y la heroína. El En Bogotá, entre 1996 y 2001, según el Insti-
término opioide es más amplio e incluye no tuto de Medicina Legal, se reportaron 10 ca-
sólo a los derivados naturales sino también a sos de muerte causada por opioides.

TABLA No. 1. CLASIFICACIÓN

OPIOIDES NATURALES OPIOIDES SEMISINTÉTICOS OPIOIDES SINTÉTICOS


Morfina Dionina Meperidina
Codeína Heroína o diacetilmorfina Tramadol
Papaverina Hidromorfona (dihidromorfinona) Metadona
Noscapina Oximorfona Pentazosina
Apomorfina Nalbufina
Dehidroxicodeinona Buprenorfina
Oxicodona Fentanilo
Alfentanil
Sulfentanil
Dextrometorfan
Loperamida
Difenoxilato
Naloxona
Nalmefene
Naltrexona
Dextropropoxifeno

1283
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FISIOPATOLOGÍA Producen dependencia física, psíquica y sín-


drome de abstinencia, bien con la supresión
La acción de los analgésicos sobre los dife- o con la administración de un antagonista.
rentes receptores se puede resumir así: Interactúan con receptores específicos del
SNC inhibiendo la actividad de las fibras do-
RECEPTORES MU lorosas. Estos receptores están distribuidos
ampliamente en el SNC, en el sistema ner-
La activación de los receptores M1 conside- vioso periférico y en el tracto gastrointestinal.
rados de alta afinidad tiene un poderoso efecto La potencia y los efectos de los opiáceos va-
analgésico. La activación de los receptores M2 rían en relación con la diferente afinidad a los
tiene un efecto depresor sobre el centro res- receptores en el SNC.
piratorio; además está implicada en la produc-
ción de dependencia física. La administración repetida de opioides dismi-
nuye la producción y secreción de encefalinas.
RECEPTORES DELTA Si se suspenden súbitamente, no existen su-
ficientes opioides endógenos que impidan o
La activación de estos receptores ocasiona aminoren el estado de excitabilidad neuronal.
analgesia y ligera depresión respiratoria. En
Los efectos máximos se ven a los 10 minutos
el sistema digestivo aumenta la actividad de
de la administración intravenosa, a los 30 des-
la secreción endocrina y exocrina y la con-
pués de una dosis intramuscular y a los 90
tractilidad del músculo liso intestinal.
después de ingestión oral. La mayoría no se
depositan, salvo el propoxifeno y la brupenor-
RECEPTORES KAPPA
fina que son solubles en grasas y tienen una
duración prolongada en casos de sobredosis.
Se relacionan con respuestas de analgesia, mio-
sis, sedación y ligera depresión respiratoria.

RECEPTORES SIGMA PRESENTACIÓN CLÍNICA


La intoxicación por analgésicos opioides, se
La activación de estos receptores produce alu-
caracteriza por la triada:
cinaciones, disforia, estimulación vasomotora
1. Miosis (pupilas puntiformes).
y respiratoria.
2. Depresión respiratoria.
3. Coma.
En la Tabla No. 2 se detallan los diversos
fármacos según su acción agonista o antago- El diagnóstico se confirma al encontrar sitios
nista sobre los receptores. de venopunción o al revertir los síntomas con
naloxona o bien por determinación analítica.
Los opiáceos se absorben rápidamente por
todas las vías. La mayoría se metaboliza por La miosis está presente en la mayoría de los
conjugación hepática, la excreción se hace en casos, aunque puede haber midriasis en el
90% de forma inactiva por la orina. Son caso de ingesta de otros fármacos, o ser con-
depresores del SNC. Tienen propiedades secuencia de la hipoxia, hipoglicemia, estado
analgésicas e hipnóticas, sedantes y eufori- preagónico o del efecto propio de algunos
zantes. opioides (meperidina, difenoxilato, propoxife-
no, pentazocina).

1284
CAPÍTULO X: INTOXICACIÓN POR OPIOIDES

TABLA No. 2. AGONISTAS Y ANTAGONISTAS DE RECEPTORES

FÁRMACO MU DELTA KAPPA Vida media Duración


(horas) analgesia (horas)
AGONISTAS
Codeína Agonista débil Agonista débil 2–4 0,5 – 1
Fentanil Agonista 0,5 – 2 1 – 1,5
Meperidina Agonista 2–5 2–4
Metadona Agonista 20 – 30 4–6
Morfina Agonista Agonista débil Agonista débil 2–4 4–5
Butorfanol Antagonista o
agonista parcial Agonista 3-4 3–4
AGONISTAS –
ANTAGONISTAS
Buprenorfina Agonista parcial 4–8
Dezocina Agonista parcial Agonista
Pentazocina Antagonista o 2–3 3–4
agonista parcial
Nalbufina Antagonista Agonista 5 3–6
ANTAGONISTA
Naloxona Antagonista Antagonista Antagonista

La depresión respiratoria se instaura con dis- reacciones disfóricas y psicosis y algunos de


minución de la frecuencia respiratoria hasta los agonistas puros producen convulsiones co-
llegar a la apnea. mo consecuencia del estímulo de los recepto-
res delta (propoxifeno y meperidina) funda-
El edema agudo de pulmón no cardiogénico mentalmente en niños y en sujetos que tomen
ocurre hasta en 50% de los casos de intoxica- IMAO (inhibidores de la monoaminooxidasa).
ción por heroína. Tiene una alta mortalidad.
Puede ser secundario a hipoxia e hipertensión La meperidina y el fentanilo pueden aumentar
pulmonar secundaria con aumento de la per- el tono muscular; los demás producen hipoto-
meabilidad capilar, a reacciones de hipersen- nía y disminución de los reflejos osteotendino-
sibilidad a la heroína, o ser de origen central sos. El fentanilo, sus derivados y la metadona
por aumento de la presión intracraneana pueden tener efectos superiores a las 24 horas.
(PIC). La depresión respiratoria también pue-
de contribuir a la broncoaspiración e insufi- Ante un coma prolongado es necesario sos-
ciencia respiratoria. pechar la posibilidad de accidentes (rupturas)
en portadores que hayan ingerido droga camu-
La depresión del SNC oscila desde el adorme- flada “mulas”.
cimiento hasta el coma profundo. En algunos
casos se puede ver excitación paradójica. La Los opioides pueden producir hipotensión y
pentazocina y el butorfanol pueden producir bradicardia aunque también hipertensión

1285
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

arterial reactiva en algunos casos de hipoxia TRATAMIENTO


y acidosis. El propoxifeno puede producir alte-
raciones de la conducción cardiaca debido a DISMINUCIÓN DE LA ABSORCIÓN
bloqueo de los canales de sodio (ensancha-
miento del QRS, diferentes grados y tipos de • Administración de carbón activado.
bloqueos, fibrilación ventricular, hipotensión, • Lavado gástrico sólo si no se administró
extrasístoles ventriculares, disminución de la en forma inmediata el carbón activado.
contractilidad). Estos efectos pueden respon-
der al tratamiento con bicarbonato sódico. MEDIDAS QUE INCREMENTAN
LA ELIMINACIÓN
Los opioides producen estimulación de los re-
ceptores medulares con náuseas y vómitos Debido al amplio volumen de distribución, y a
lo que, asociado a la depresión neurológica, la disponibilidad del antídoto (naloxona) no son
supone un gran riesgo de broncoaspiración. útiles las medidas para forzar diuresis y elimi-
nar el tóxico.
La inyección intrarterial involuntaria produce
inflamación y dolor súbito que pueden progre- MANEJO ESPECÍFICO
sar hasta gangrena en la región irrigada por
la arteria. Las inyecciones intradérmicas pue- Aplicación de naloxona 0,4 mg IV o subcutá-
den causar abscesos locales, necrosis y nea. Se puede administrar cada minuto hasta
úlceras. completar los 2 mg; si no se obtiene respues-
ta adecuada, se incrementa la dosis a 2 mg
cada 5 minutos hasta llegar a 10 mg. En ni-
AYUDAS DIAGNÓSTICAS ños la dosis es de 0,001 mg/kg de peso; si no
se logra respuesta la dosis se incrementa a
• Examen físico detallado (buscando sitios 0.01 mg/kg. El efecto de la naloxona es más
de venopunción). corto que el de los opiáceos.
• Gases arteriales.
• Radiografía de tórax. La administración de bicarbonato de sodio ha
• Glicemia. mostrado utilidad cuando el paciente que se
• Análisis cualitativo y cuantitativo de ha intoxicado con propoxifeno presenta pro-
opioides. longación del intervalo QRS o hipotensión.
• Electrolitos: sodio, potasio, cloro, calcio.
MANEJO SINTOMÁTICO

ATENCION PREHOSPITALARIA • Mantener la vía aérea.


• Manejar las convulsiones con benzodiaze-
• Administrar carbón activado. Inducir el vó- pinas.
mito si el paciente está consciente. • Dobutamina en caso de intoxicación por
• Transportar en decúbito lateral izquierdo propoxifeno, por tener efecto inotrópico y
para evitar broncoaspiración. cronotrópico negativo.

1286
CAPÍTULO X: INTOXICACIÓN POR OPIOIDES

CRITERIOS DE REFERENCIA para los niños o para personas con ideas sui-
cidas.
Por el corto efecto de la naloxona, el paciente
debe ser monitorizado en una unidad de cui- Se debe instruír adecuadamente a los pacien-
dado intensivo por lo menos por 6–12 horas tes para que no manejen a voluntad propia la
después de encontrarse asintomático. Si se dosificación de los opioides/opiáceos; evitar
trató de un intento de suicidio el paciente debe el uso de combinaciones con otros depresores
ser valorado por un consultor de psiquiatría. a menos que sean ordenadas por el médico
tratante.

PRONÓSTICO
LECTURAS RECOMENDADAS
Si el tratamiento se realiza en forma rápida y
adecuada la evolución es favorable en la gran 1. Ghuran A, Nolan J. Recreational drug misuse:
mayoría de los casos. La presencia de ede- issues for the cardiologist. Heart 2000; 83:627-33.
ma agudo de pulmón ensombrece el pronós- 2. Sporer K. Strategies for preventing heroin
overdose. BMJ 2003; 326:442-4.
tico porque incrementa la tasa de mortalidad
3. Sporer K. Acute heroin overdose. Ann Intern Med
1999; 130:584-90.
4. Sterret C. Patterns of presentation in heroin
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN overdose resulting in pulmonary edema. Am J
Emerg Med 2003; 21:32-4.
Este grupo de medicamentos debe ser alma- 5. Warner–Smith M. Morbidity associated with non-
cenado en sitios que sean de difícil acceso fatal heroin overdose. Addiction 2002; 97:963-7.

1287
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XI

Intoxicación por etanol

María Clara Pinzón Iregui, MD


Departamento de Medicina Interna, Consultoría en Adicciones
Jefe Sección de Toxicología
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l daño que el alcohol produce en la socie-


dad es grande. Se ha determinado que
45% a 70% de todos los accidentes automovi-
PROPIEDADES FÍSICAS
Y QUÍMICAS DEL ETANOL-
FISIOPATOLOGÍA
lísticos, mortales o nó, están asociados a su
presencia. Igualmente, el alcohol se asocia a El alcohol etílico o etanol, puede obtenerse bajo
otro tipo de incidentes como incendios, caídas, diferentes formas y concentraciones, a saber:
ahogamientos, homicidios, lesiones persona-
les, suicidios, violencia familiar y abandono del • Cerveza del barril: 4%.
hogar. Se asocia también a cuadros de cirro- • Cerveza embotellada: 5-7%.
sis, hemorragia de vías digestivas y pancrea- • Vino Común: 11-13%.
titis. A largo plazo produce alteraciones en • Vino añejo: 14-18%.
todos los sistemas como demencia, neuropa- • Aperitivos: 15-25%.
tía, miocardiopatía, arritmias, riesgo de acci- • Licores dulces: 20-35%.
dentes cerebro-vasculares (ACV) e infarto • Destilados (ginebra, ron, whisky, brandy,
agudo del miocardio (IAM), lo mismo que ane- aguardiente): 36-45%.
mia por déficit de folatos y vitamina B12. • Alcohol absoluto: 94%.

La sociedad trata el alcohol de una manera El alcohol es una sustancia derivada de la fer-
totalmente diferente a otras drogas que afec- mentación de los carbohidratos vegetales. No
tan el ánimo (psicoactivas). Beber alcohol es es un producto normal del metabolismo hu-
legal para los adultos, es “permitido” en los mano, por tanto su ingesta en cantidades ele-
adolescentes y es fomentado en la gran ma- vadas produce un desequilibrio metabólico,
yoría de relaciones sociales y de negocios. puesto que el organismo destina recursos para
Las bebidas alcohólicas están disponibles pa- procesarlo y eliminarlo. Algunas de sus pro-
ra toda la población y son vendidas con toda piedades son:
la libertad posible, incluso como si fueran ali-
mento. La frecuencia de su uso popular y la 1. Es altamente liposoluble, lo cual le permite
publicidad, a veces de carácter oficial, promo- atravesar las membranas celulares, y es
vida en medios radiales, escritos y televisión, altamente afín por el agua, por lo cual, lle-
inducen consciente e inconscientemente a la ga a cualquier célula.
ingesta de alcohol, no sólo a los adultos sino 2. Por encima de determinadas concentracio-
también a los niños y a los adolescentes. nes, es directamente tóxico. Además, sus
metabolitos también lo son, por su eleva-
da reactividad química.

1288
CAPÍTULO XI: INTOXICACIÓN POR ETANOL

3. Es un producto altamente energético: por ejerce su acción sobre las neuronas del siste-
cada gramo ingerido se generan 7,2 kcal. ma nervioso central. El estímulo o excitación
inicial se debe a la depresión ejercida sobre
Es rápidamente absorbido por el tracto gastro- los sistemas inhibidores de la formación reti-
intestinal, 20% en estómago y 80% en duode- cular, que controlan la actividad cortical.
no y yeyuno. Su rata de absorción depende
del tipo de comida que lo acompañe (grasas Hay teorías sobre acciones más específicas
y proteínas disminuyen la absorción) y de si sobre los receptores en los que estarían inclui-
las bebidas son o no carbonatadas, caso éste dos aquellos para opioides y receptores GABA
en que se absorben más rápido. Los efectos (la naloxona tiene algún efecto en intoxica-
del alcohol se empiezan a notar a los 10 mi- ciones por etanol), potenciando selectivamen-
nutos de la ingesta y el pico aparece entre te el efecto inhibidor del GABA sobre las neu-
40-60 minutos después, completándose la ronas corticales.
absorción total en seis horas.

Noventa por ciento del etanol es metabolizado CUADRO CLÍNICO


totalmente en el hígado; el resto se elimina
por el aire espirado, la orina y el sudor. La El efecto neurotóxico del etanol en individuos
capacidad hepática de metabolismo es satu- no habituados se inicia con alcoholemias de
rable y cuando se alcanza este punto la alco- 50mg/dL. Los sujetos con tolerancia por uso
holemia sube con gran rapidez. Hay grandes continuo o habitual mantienen conductas nor-
variaciones en la tasa metabólica, pero es males con tasas de alcoholemia mucho más
aproximadamente 10 g por hora. altas. Los grados clínicos de intoxicación que
se describen a continuación se aplican para
Cuando el consumo de alcohol supera deter- todos los individuos:
minado límite, y especialmente cuando su uso
es habitual, entra en funcionamiento un siste- FASE DE EXCITACIÓN:
ma enzimático microsómico llamado MEOS • Alcoholemia menor de 50 mg%: no hay al-
(“microsomal ethanol oxidizing system”), cuya teraciones detectables. Algunos notan cam-
actividad está dada fundamentalmente por la bios psíquicos que logran reprimir.
isoenzima P4502E1 ó CYP2E1. Esta es indu- • 50-75 mg%: efecto ansiolítico, sensación
cible y su acción genera desequilibrios meta- de relajación. Ligera incoordinación moto-
bólicos y la aparición de radicales libres, los ra. Conducir comienza a ser peligroso.
cuales juegan un papel muy importante en la • 75-100 mg%: tendencia subjetiva a la co-
patogenia de la hepatopatía alcohólica. En la municación con los demás. Conducir defi-
mucosa del estómago existe actividad de otra nitivamente es peligroso.
enzima, la alcohol-deshidrogenasa, que cola- • 100-150 mg%: cambio evidente del esta-
bora al denominado “efecto de primer paso”. do anímico y de la conducta. Descenso de
la autocrítica. Ataxia incipiente.
• 150-200 mg%: desinhibición, manifestación
ACCIONES DEL ETANOL de los rasgos profundos de la personali-
dad: sociabilidad, agresividad, inhibición.
Es indudablemente la intoxicación más fre- Disartria, ataxia y alteraciones en el curso
cuente en los servicios de urgencia. El etanol del pensamiento.

1289
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FASE DE EMBRIAGUEZ: 2. A: Annoyed. Comentarios de terceros con


• Con alcoholemias entre 200-300 mg%. La relación al hábito alcohólico.
disartria, con habla incoherente y entrecor- 3. G: Guilty. Presencia de sentimientos de
tada y la ataxia, con incapacidad para ca- culpa.
minar, son muy intensas y el sujeto es in- 4. E: Eye-opener. Necesidad de consumo
capaz de proseguir una conducta orienta- matutino.
da. Intensa sensación vertiginosa, náuseas
y vómitos frecuentes. La presencia de una respuesta afirmativa su-
pone riesgo de alcoholismo, mientras que dos
FASE COMATOSA: o más, son alcoholismo confirmado.
• Con alcoholemias que sobrepasan los 300
mg%. Estupor progresivo, incapacidad para
la bipedestación, habla ininteligible, evolu- DIAGNÓSTICO Y DEFINICIONES
ción hacia el coma, hipotermia, bradicardia
e hipotensión. En esta fase puede produ- En los procesos judiciales son múltiples los
cirse la muerte por depresión respiratoria. casos que se relacionan de una u otra forma
con el estado de embriaguez de alguno de
FORMAS ESPECIALES: los implicados.
• Cuadros de agitación incluso con dosis
pequeñas de etanol, seguidos de sueño DEFINICIONES DE LA EMBRIAGUEZ
profundo y “lagunas”. Se denomina embria- ALCOHÓLICA:
guez patológica. Se produce en algunos 1. Real Academia de la Lengua: “Es la per-
sujetos predispuestos. turbación de las facultades mentales, cau-
• Origen o agravamiento de una depresión, sada por la abundancia con que se ha be-
con pérdida de las inhibiciones sanas, po- bido vino u otro licor”.
niendo en peligro de suicidio. Otros pueden 2. Técnico-médica: “Estado de alteración
presentar ansiedad o ataques de pánico. psicosomática producido por el uso o abu-
• “Guayabo” o estado post intoxicación etíli- so de sustancias embriagantes”.
ca: producido por la diuresis hídrica, irritabi-
lidad de la mucosa gástrica, vasodilatación El diagnóstico de embriaguez debe realizarse,
craneal y afectación muscular. Síntomas: como en cualquier otra intoxicación aguda,
Irritabilidad, cefalea, polidipsia, astenia, mediante anamnesis (si es posible), examen
mialgias, vómitos. físico detallado y luego, de acuerdo al resul-
tado de los mismos, el médico clínico o el
forense determinarán si se requieren exáme-
CRITERIOS DE ABUSO DE ALCOHOL nes paraclínicos complementarios.

Hay muchas pruebas y cuestionarios dirigidos


a determinar la presencia de abuso de alco- UNIDAD ALCOHÓLICA
hol. La prueba que se utiliza universalmente
en los servicios de urgencias por su rapidez y Existe una medida internacional denominada
gran especificidad es la CAGE (también usa- unidad alcohólica. Se define como la canti-
do para intoxicación por cocaína): dad de alcohol contenida en una bebida, que
1. C: Cut-down: reflexiones personales sobre ingerida de una sola vez eleva la alcoholemia
posible abuso. de un adulto entre 20-25 mg%. La equivalen-

1290
CAPÍTULO XI: INTOXICACIÓN POR ETANOL

cia se hace con base en la “dosis social”, que • Incoordinación motora ++.
correspondería a un trago de whisky (30 cc), • Aumento del polígono de sustentación ++.
una pinta de cerveza (330 cc), o una copa de • Somnolencia.
vino (250 cc). • Disartria evidente.
• Notorio aliento alcohólico.
Un individuo que ingiera una unidad alcohóli- 3. EMBRIAGUEZ SEVERA O GRADO III:
ca, requerirá entre dos y tres horas para eli- Alcoholemia entre 300-400 mg%.
minar totalmente el etanol. Por esta razón se • Alteración convergencia ocular no
recomienda que, para efectos de diagnóstico explorable.
clínico (hospitales) o pruebas periciales (me- • Nistagmus postural +++.
dicina legal), el sujeto implicado sea exami- • Incoordinación motora no explorable.
nado antes de haber transcurrido tres horas • Aumento del polígono de sustentación no
de los hechos. explorable.
• Estupor.
La tolerancia al alcohol (“aquella capacidad • Disartria no explorable.
del organismo para asimilar cada vez mas una • Aliento: Olor a alcohol marcado.
mayor cantidad del fármaco, experimentando 4. EMBRIAGUEZ GRAVE O GRADO IV:
los mismos efectos”), en cuestiones médico- Alcoholemia entre 400-500 mg%.
legales tiene implicaciones importantes, pues • Estado de coma.
es precisamente por este fenómeno que la co- • Aliento: olor a alcohol.
rrelación entre los signos clínicos de la intoxi- • Hipotensión.
cación etílica y la alcoholemia no es siempre • Bradipnea.
constante, pues se ve modificada de acuerdo • Hipotermia.
con la susceptibilidad personal del sujeto. 5. EMBRIAGUEZ GRADO V–MUERTE:
Alcoholemia mayor de 500 mg%.
Actualmente, la clasificación de la embriaguez
alcohólica se hace teniendo en cuenta la in- Cuando el examen físico no es posible por
tensidad de las manifestaciones clínicas que comorbilidad asociada, es decir, trauma cra-
se puedan correlacionar con determinadas neo-encefálico o generalizado, intoxicaciones
cifras de alcoholemia y de ahí se obtienen los mixtas por otros psicoactivos, enfermedades
cuatro estados de la intoxicación, a saber: asociadas a deterioro neurológico, metabó-
licas o infecciosas, el recurso a seguir es valer-
1. EMBRIAGUEZ LEVE O GRADO I: se únicamente de la alcoholemia, que se con-
Alcoholemia entre 50-149 mg% sidera sugestiva de embriaguez entre 50-100
• Alteración de la convergencia ocular +. mg% y conclusiva por encima de 100 mg%.
• Nistagmus postural +. En la nueva legislación del Código de Tránsi-
• Incoordinación motora +. to y Transporte se considera embriaguez al-
• Aumento del Polígono de sustentación +. cohólica penalizable desde los 40mg%.
• Euforia o somnolencia leve.
• No disartria.
• Aliento alcohólico ausente o leve. PRUEBAS DIAGNÓSTICAS
2. EMBRIAGUEZ MODERADA O GRADO II:
Alcoholemia entre 150-299 mg% 1. Nistagmus: se hace girar al paciente sobre
• Alteración convergencia ocular ++. su propio eje, en movimientos de rotación,
• Nistagmus postural ++. a una velocidad máxima de 5 vueltas en

1291
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

10 segundos, para que posteriormente fije • Manejar la acidosis con rehidratación y


su mirada en un objeto fijo situado a 20 cm bicarbonato de sodio en dosis de 0,5-1
de su nariz. Es un signo clínico de gran meq por kg de peso en caso de profun-
credibilidad pues no se modifica a voluntad. da depresión del estado de conciencia
2. Incoordinación motora y aumento del polí- e hipotensión persistente a pesar de la
gono de sustentación: cuando el examina- rehidratación.
do está embriagado separa las piernas al • No tiene mayor significado en el tratamien-
caminar para poder mantener el equilibrio to inducir vómito o realizar lavado gástri-
(marcha atáxica) y al estar de pie se tam- co por la rápida absorción del alcohol.
balea. • El carbón activado no tiene utilidad en
3. Disartria: evaluada a través del lenguaje. el caso de los alcoholes.
4. Otros signos clínicos: rubicundez facial, • Hemodiálisis en pacientes con embria-
inyección conjuntival, midriasis leve guez G-IV a G-V, si no son alcohólicos
reactiva. crónicos.
5. Alcoholemia: tomar 5-7 mL de sangre en • Los diuréticos no ofrecen utilidad para
tubo con anticoagulante y preservativos, aumentar la eliminación y, por el con-
idealmente fluoruro de sodio. No utilizar al- trario, aumentan la deshidratación del
cohol para la punción venosa, y refrigerar paciente.
el tubo hasta el estudio. • En caso de diagnosticarse abuso de al-
cohol a través del cuestionario CAGE,
debe hacerse intervención breve (5-10
TRATAMIENTO minutos de entrevista con el paciente,
advirtiendo los riesgos e implicaciones
El cálculo del consumo de etanol de una per- del consumo) y en caso de considerar
sona se basa en la graduación alcohólica de el caso como grave, recurrir a interven-
la bebida y la cantidad consumida. ción por Psiquiatría (si está disponible)
o remisión inmediata a centros especia-
Gramos de alcohol = Volumen (dL) x gradua- lizados.
ción (mL/100) x 0,8
2. ALCOHOLISMO CRÓNICO
1. INTOXICACIÓN AGUDA: El tratamiento es • Requiere uso de tiamina, glucosa, hidra-
básicamente de soporte: tación, prevención de síndrome de abs-
• Proteger la vía aérea y prevenir la bron- tinencia.
coaspiración. Intubar y asistir ventilato- • Remisión a consulta de psiquiatría o a
riamente si es necesario (embriaguez centros especializados para abuso de
grado IV). sustancias psicoactivas.
• Corregir hipotermia con calentamiento
progresivo. 3. SÍNDROME DE ABSTINENCIA
• Tratar el coma y las convulsiones (ben- • Hidratación, vigilancia de electrolitos y
zodiazepinas) si estas se presentan. glucosa.
• Hidratar con Solución Salina Normal • Tiamina oral, 100 mg cada ocho horas
(0,9%) y añadir dextrosa en agua desti- el primer día y luego 100 mg diarios.
lada (DAD) al 10% en caso de embria- • Manejar ansiedad con benzodiazepinas
guez grado III o mayor e hipoglicemia (diazepam, lorazepam, alprazolam) se-
confirmada. gún se requiera.

1292
CAPÍTULO XI: INTOXICACIÓN POR ETANOL

• Manejo de hipertensión y taquicardia of reducing the risk of injury recurrence. Ann Surg
con benzodiazepinas. Si no hay mejo- 1999; 230:473-80.
ría proceder al uso de labetalol si está 4. Gentilello LM, Villaveces A, Ries RR, et al.
Detection of acute alcohol intoxication and chronic
disponible, o clonidina a dosis de 75 -
alcohol dependence by trauma center staff. J Trau-
150 mcg cada seis a ocho horas si la TA ma 1999; 47:1131-5.
del paciente lo permite. 5. Ghuran A, Nolan J. Recreational drug misuse:
• En caso de delirium tremens, o alucino- issues for the cardiologist. Heart 2000; 83:627-33.
sis alcohólica, asociar al manejo ante- 6. Lindenbaum GA, Carroll SF, Daskal I, et al.
rior antipsicóticos y manejo de la hiper- Patterns of alcohol and drug abuse in an urban
termia con medidas físicas o acetamino- trauma center: the increasing role of cocaine abu-
fén si se descarta toxicidad hepática. se. J Trauma 1989; 29:1654-8.
7. Madan A, Beech DJ, Flint L. Drugs, guns, and kids:
the association between substance use and injury
caused by interpersonal violence. J Pediatr Surg
LECTURAS RECOMENDADAS
2001; 36:440-2.
1. Angell M, Kassirer JP. Alcohol and other drugs— 8. Sims DW, Bivins BA, Obeid FN, Horst HM,
toward a more rational and consistent policy. N Sorensen VJ, Fath JJ. Urban trauma: a chronic
Engl J Med 1994; 331:537-9. recurrent disease. J Trauma 1989; 29:940-6.
2. Foxcroft DR, Ireland D, Lister-Sharp DJ. Primary 9. Sloan EP, Zalenski RJ, Smith RF, et al. Toxicology
prevention for alcohol misuse in young people. screening in urban trauma patients: drug
Cochrane Database Syst Rev 2003; 3:CD003024. prevalence and its relationship to trauma severity
3. Gentilello LM, Rivara FP, Donovan DM, et al. Al- and management. J Trauma 1989; 29:1647-53.
cohol interventions in a trauma center as a means

1293
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XII

Intoxicación por metanol

Myriam Gutiérrez MD, MSc


Profesor Asistente de Toxicología
Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia

GENERALIDADES
Y EPIDEMIOLOGÍA

E l llamado metanol o alcohol de madera


se denomina también alcohol industrial,
alcohol de cocina o alcohol de “reverbero”. Es
hol de cocina o industrial por desconocimien-
to o ignorancia.

un ingrediente común en muchos solventes, En Bogotá, según el Instituto Nacional de Me-


removedores de pinturas, soluciones de lim- dicina Legal, durante los años 1996-2001 se
pieza, colorantes, resinas, adhesivos, produc- reportaron 99 muertes por intoxicación metí-
tos de impermeabilización, cristales inastilla- lica comprobadas por análisis toxicológico;
bles y productos fotográficos y otros materia- esto demuestra la gran magnitud del proble-
les. El amplio uso que tiene el metanol en la ma en nuestro medio.
industria hace mayor el riesgo de exposición
profesional, debido a que se puede presentar
inhalación de vapores o absorción por la piel FISIOPATOLOGÍA
por manipulación inadecuada.
El metanol se absorbe por vía oral, piel, muco-
Además de la exposición ocupacional, la into- sas intactas y por vía pulmonar; perfunde rá-
xicación aguda se presenta principalmente por pidamente todos los órganos, especialmente
adulteración de licores que se expenden co- aquellos ricos en agua como cerebro, humor
mercialmente. El valor comercial con respec- acuoso y riñón.
to al alcohol etílico es aproximadamente tres
veces menor y el metanol se comercia libre- MECANISMO DE TOXICIDAD
mente sin ningún tipo de restricción legal. Otro
riesgo de los alcohólicos crónicos es la cos- El metanol es metabolizado en el hígado, en
tumbre de consumir “pipo” o alcohol antisép- la mitocondria del hepatocito, por la alcohol-
tico con gaseosa usando alcohol “contamina- deshidrogenasa a formaldehído y subsecuen-
do” o alcohol de cocina. temente por la aldehído-deshidrogenasa a áci-
do fórmico. La acidosis sistémica es causada
En el caso de los niños la vía de ingreso es la por el ácido fórmico y por el ácido láctico que
piel, pues las madres tienen la costumbre po- se genera por el estado de deterioro genera-
pular de hacer fricciones de alcohol como tra- lizado del paciente; mientras que la ceguera
tamiento de síntomas comunes, usando alco- es causada principalmente por el formato.

1294
CAPÍTULO XII: INTOXICACIÓN POR METANOL

Tanto el etanol como el metanol compiten por Después del período de latencia:
la enzima alcohol-deshidrogenasa, aunque Por encima de 30 horas, se presenta acidosis
esta enzima prefiere metabolizar el etanol (afi- metabólica severa, desórdenes visuales, ce-
nidad 20 veces mayor); por ello el tratamiento guera, convulsiones, coma, y puede ocurrir la
para la intoxicación por metanol se basa en el muerte. Los pacientes describen alteraciones
uso de alcohol etílico. visuales, como visión borrosa, fosfenos, esco-
tomas, colores alrededor de los objetos y
FARMACOCINÉTICA otros. En el examen del fondo de ojo se pue-
de evidenciar hiperemia del disco óptico o
El metanol es absorbido y rápidamente distri- papiledema. La midriasis precoz y no reactiva
buido por el agua del cuerpo. No se une a es un signo de mal pronóstico y significa pér-
proteínas. Es metabolizado lentamente por la dida irreparable de la función visual.
alcohol-deshidrogenasa. La vida media osci-
la entre 2 y 24 horas. Apenas cerca del 3% es
excretado sin cambios por el riñón y menos DIAGNÓSTICO
del 10% a través del pulmón.
El diagnóstico se basa en la historia clínica,
DOSIS TÓXICA los síntomas y los hallazgos de laboratorio.
Gases arteriales que demuestren acidosis
La dosis letal del metanol está estimada en metabólica son muy significativos de intoxi-
30-240 mL (20-150 gramos). La dosis tóxica cación por alcohol metílico. El cálculo de la
mínima es aproximadamente de 100 mg/kg. brecha aniónica, puede ser usado para esti-
Se pueden encontrar niveles elevados de me- mar los niveles de metanol y predecir la seve-
tanol en sangre luego de exposición dérmica ridad de la ingestión.
extensa o por inhalación. Una concentración
sérica de 40 mg% es mortal. METANOL SÉRICO Y METABOLITOS

Niveles >20 mg/dL pueden ser considerados


CUADRO CLÍNICO tóxicos, y niveles >40 mg/dL son considera-
dos fatales. Después del período de latencia,
En las primeras horas (período de latencia): niveles bajos o no detectables de metanol no
Después de la ingestión, los pacientes intoxi- descartan una intoxicación seria en un pacien-
cados con metanol pueden presentar cefalea te sintomático, porque todo el metanol puede
precoz (generalmente de tipo pulsante), gas- haber sido metabolizado a formato o
tritis, embriaguez, náuseas, vómito, poco dife- formaldehído.
renciables de la intoxicación etílica. La acido-
sis no se presenta usualmente, porque el me- Concentraciones séricas elevadas de formal-
tabolismo de las sustancias tóxicas no ocurre dehído pueden confirmar el diagnóstico y son
tan rápidamente. Se puede encontrar eleva- una mejor medida de toxicidad.
ción de la brecha aniónica (anion-gap). El
periodo de latencia puede ser mayor cuando Metanol o formaldehído en orina indica elimi-
el etanol es ingerido concurrentemente con el nación del tóxico.
metanol.

1295
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

OTROS ESTUDIOS DE LABORATORIO TERAPIA CON ETANOL

Incluyen electrolitos, glucosa, BUN, creatinina, Administrar etanol para saturar la alcohol-
osmolaridad sérica, gases arteriales, brecha deshidrogenasa y prevenir la formación de
aniónica (anion gap), niveles de etanol y de metabolitos tóxicos del metanol. La terapia
lactato. También puede ser enviado al labora- está indicada en los siguientes pacientes:
torio de toxicología analítica el alcohol o bebi-
da alcohólica sospechosa para su análisis. • Una historia de ingesta apreciable de meta-
nol, cuando los niveles séricos de metanol
no son evaluables inmediatamente y si la
ATENCIÓN PREHOSPITALARIA brecha aniónica es mayor de 5 mOsm/L.
• Acidosis metabólica y brecha aniónica >5-
Toda persona que haya ingerido licor o que 10 mOsm/L no atribuíble al uso del etanol.
haya sido friccionada con alcohol y presente • Reporte de laboratorio cualitativo de meta-
cefalea, cualquier alteración visual, dolor ab- nol positivo en sangre o formaldehído en
dominal y/o vómito debe ser remitida inme- orina.
diatamente a urgencias para valoración mé-
dica. El personal paramédico puede iniciar la El médico de urgencias debe de estar prepa-
administración de líquidos endovenosos y el rado para atender esta intoxicación con un alto
vendaje ocular precoz. No se recomienda ad- grado de eficacia y por ello se sugiere el es-
ministrar bebidas alcohólicas antes de la eva- quema de etiloterapia usado en la Facultad
luación médica y de la toma de muestras de de Medicina de la Universidad de California,
laboratorio iniciales por el peligro de equivo- San Francisco, así:
carse en el diagnóstico.
• Dosis de carga: 0,5-1 mL de alcohol abso-
luto/kg de peso, durante 15-30 minutos.
TRATAMIENTO • Dosis de mantenimiento: 0,16 mL de alco-
hol absoluto/kg de peso/hora, durante 72
El objetivo fundamental es evitar la degrada- horas.
ción del metanol a formaldehído y a ácido
fórmico, además de extraer totalmente el tóxi- (Se cuenta con ampollas de alcohol absoluto
co y neutralizar sus efectos metabólicos. al 96% de 2mL, 5mL, 10 mL. Para aplicación
intravenosa se debe diluir la cantidad necesa-
MEDIDAS DE EMERGENCIA Y SOPORTE ria en dextrosa al 5% a una concentración de
• Mantenimiento de la vía aérea y asistencia 10% o menos para evitar que la mezcla cause
ventilatoria si es necesario. flebitis por el efecto irritante del alcohol etílico
• Control de temperatura, tensión arterial y concentrado).
pulso.
• Oxigenoterapia. Ante la carencia de alcohol etílico puro o en
• Vendaje ocular precoz. ampollas, se puede suministrar por vía oral
• Tratamiento del coma y de convulsiones. licor en sus diferentes presentaciones dispo-
• Tratamiento de la acidosis metabólica con nibles como el whisky o vodka (40-45%),
bicarbonato de sodio intravenoso (la correc- aguardiente (30-35%) haciendo los cálculos
ción de la acidosis debe ser guiada por correspondientes. En ancianos y en niños es-
gases arteriales). tas dosis de etanol pueden producir importante

1296
CAPÍTULO XII: INTOXICACIÓN POR METANOL

disminución de la glicemia, por lo que se debe intravenosos cada cuatro horas por seis do-
hacer control periódico de los niveles sanguí- sis mínimo.
neos de glucosa y suministrar suero gluco-
sado. El tratamiento en casos graves debe ser rea-
lizado interdisciplinariamente por el toxicólogo,
Ejemplo: paciente de 60 kilos de peso, re- el nefrólogo y el equipo de la unidad de cuida-
querirá 60 mL de alcohol absoluto como do- do intensivo.
sis de carga, los cuales se deben diluir míni-
mo en 600 mL de DAD al 5%, para pasar IV HEMODIÁLISIS
en 30 minutos; si no hay presentación en am-
pollas se administrará 200 mL de aguardiente Es el procedimiento más rápido y efectivo.
al 30% por sonda nasogástrica (SNG), tenien- Está indicado cuando el paciente presenta pH
do en cuenta que si 100 mL de aguardiente menor o igual de 7,2, brecha aniónica >10
contienen 30 mL de alcohol absoluto, los 60 mOsm/l, bicarbonato <10, niveles de metanol
ml que necesitamos están contenidos en 200 sérico de 40 mg%, compromiso visual impor-
mL. La dosis de mantenimiento por vía intrave- tante o deterioro general progresivo.
nosa será de 0,16 mL por 60 kg cada hora, lo
que equivale a 9,6 mL en los líquidos de man-
tenimiento o a 33,3 mL (una onza o copita) de CRITERIOS DE REFERENCIA
aguardiente por SNG cada hora.
Cuando el paciente presenta sintomatología de
DESCONTAMINACIÓN Y OTRAS MEDIDAS intoxicación por alcohol metílico debe ser remi-
tido a un centro hospitalario de alto nivel de
Prehospitalaria: no inducir vómito. complejidad para su manejo integral; posterior-
mente debe ser valorado por oftalmología por
Hospital: lavado gástrico. posibles secuelas. También debe ser evalua-
do por psiquiatría en el caso de haberse presen-
Diuresis forzada: por medio de diuréticos como tado intento de suicidio o alcoholismo crónico.
la furosemida se consigue eliminar metanol.
Se debe hacer un balance estricto de las pér-
didas de líquidos y electrolitos. PRONÓSTICO
Tiamina: cofactor importante para el metabo- El metanol es una sustancia altamente tóxica
lismo de los carbohidratos, está indicada en y la absorción, aun de poca cantidad, puede
intoxicación por alcohol etílico y en etiloterapia. llevar a la muerte si la consulta o el tratamien-
Se administran 100 mg IV cada ocho horas to no se dan a tiempo y de manera adecuada.
durante tratamiento IV y se continúa con 300 Puede dejar secuelas como ceguera irrever-
mg/día vía oral por 10 días más. sible, lesiones neurológicas severas o, en el
peor de los casos, producir la muerte.
Ácido fólico: es parte del complejo vitamínico
B. Puede favorecer el metabolismo del ácido
fórmico y su eliminación. El ser humano no PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
cuenta con suficiente ácido fólico para lograr
ese paso metabólico, por lo cual se requieren Debido a que en la mayoría de los casos ésta
dosis altas de 50 mg (niños 1mg/kg) intoxicación se presenta de manera acciden-

1297
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

tal se debe enfocar en las medidas de pre- LECTURAS RECOMENDADAS


vención como son:
1. Blas MJ, Nava MS. Metanol Inhalation Intoxication.
• Brindar la protección adecuada a las per- Rev Asoc Mex Med Crit y Ter Int 2000; 14: 67-70.
sonas que laboran en ambientes contami- 2. Barceloux DG, Bond GR, Krenzelok EP, et al.
American Academy of Clinical Toxicology practice
nados.
guidelines on treatment of methanol poisoning. J
• Evitar el consumo de bebidas alcohólicas Toxicol Clin Toxicol 2002; 40:415-46.
de dudosa procedencia. 3. Sutton TL, Foster RL, Liner SR. Acute methanol
• Erradicar la costumbre de friccionar con ingestion. Pediatric Emerg Care 2002; 18:360-363.
alcohol los niños que padecen de síntomas 4. Yost DA. Acute care for alcohol intoxication.
generales como fiebre. Postgraduate Medicine 2002; 112:14-6.
• Educar a la comunidad en general sobre 5. Essama Mbia JJ, Guerit JM, Haufroid V, Hantson
el peligro y los cuidados de manejo del al- P. Fomepizole therapy for reversal of visual
impairment after methanol poisoning: a case
cohol industrial o alcohol de cocina o “re-
documented by visual evoked potentials
verbero”. investigation. Am J Ophthalmol 2002; 134:914-6.
6. Davis LE, Hudson A, Benson BE, et al. Methanol
poisoning exposures in the United States: 1993-
1998. J Toxicol Clin Toxicol 2002; 40:499-505.
7. Brent J, McMartin K, Phillips S, Aaron C, Kulig K.
Fomepizole for the treatment of methanol
poisoning. N Engl J Med 2001; 344:424-9.

1298
CAPÍTULO XIII: INTOXICACIÓN POR MONÓXIDO DE CARBONO

CAPÍTULO XIII

Intoxicación por monóxido de carbono

Myriam Gutiérrez MD, MSc


Profesor Asistente de Toxicología
Facultad de Medicina
Universidad Nacional de Colombia

GENERALIDADES
Y EPIDEMIOLOGÍA

E l monóxido de carbono (CO) es incoloro,


inodoro, insípido, no irritante, lo cual facilita
el proceso de intoxicación debido a que no des-
oxígeno, lo cual resulta en una saturación re-
ducida de la oxihemoglobina y en disminución
de la capacidad de transportar oxígeno a los
pierta fenómenos de alergia que le permitan al tejidos. Además, la curva de disociación de la
paciente crear conciencia de la presencia del oxihemoglobina es desplazada hacia la iz-
tóxico. Es producido por la combustión incom- quierda. Las personas que sufren de anemia
pleta de algún material que contenga carbono. corren un peligro mayor de intoxicarse, pues
La exposición humana incluye la inhalación de el monóxido de carbono impide la liberación
humo en los incendios, el exhosto de los auto- del oxígeno de la oxihemoglobina no altera-
móviles, pobre ventilación al contacto con car- da. El monóxido de carbono puede inhibir di-
bono, kerosene o gas de estufas, hornos o cal- rectamente la citocromo oxidasa.
deras y el hábito del cigarrillo. Se calcula que
quien fuma dos paquetes de cigarrillos por día, La toxicidad es consecuencia de hipoxia ce-
tiene un nivel promedio de carboxihemoglobina lular e isquemia, por lo que no importa el peso
de 5,9%. Un cigarrillo produce entre 40-100 mL corporal de la persona que esté expuesta, y
de monóxido de carbono, por lo que varias ca- tampoco el número de personas presentes,
jetillas pueden elevar esta cifra hasta 1-2 litros. sino que cada uno de ellos está igualmente
expuesto al riesgo.
En Bogotá, según el Instituto Nacional de Me-
dicina Legal, durante los años 1996 a 2001 DOSIS TÓXICA
se reportaron 40 muertes por monóxido de car-
bono comprobadas por análisis toxicológico; La concentración máxima permitida en los si-
esto nos demuestra la magnitud del proble- tios de trabajo para el monóxido de carbono
ma en nuestro medio. debe ser de 25 ppm con un tiempo de trabajo
promedio de ocho horas. Los niveles consi-
derados como inmediatamente dañinos son
FISIOPATOLOGÍA de 1.200 ppm en adelante. Varios minutos de
exposición a 1.000 ppm (0,1%) pueden resul-
El monóxido de carbono se une a la hemoglo- tar en 50% de saturación de la carboxihe-
bina con una afinidad 250 veces mayor que el moglobina.

1299
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CUADRO CLÍNICO contrados en un garaje cerrado con un motor


de auto funcionando. Aunque no son signos
Los síntomas de intoxicación se originan pre- específicos, se observa coloración rojo-cere-
dominantemente en los órganos con alto con- za de la piel, o la sangre venosa de color rojo
sumo de oxígeno como el cerebro y el cora- brillante. La máquina de gases arteriales san-
zón. El proceso de intoxicación puede simular guíneos mide la presión parcial de oxígeno
cualquiera de las encefalopatías conocidas. disuelta en plasma (PO2), pero la saturación
de oxígeno es calculada a partir de la PO 2 y
La mayoría de los afectados presenta cefalea por tanto no es evaluable en los pacientes con
con sensación de pulsación de las arterias intoxicación por monóxido de carbono. La oxi-
temporales, mareo, náuseas y vómito. Pueden metría de pulso también puede dar resultados
ocurrir fenómenos sensoriales auditivos y vi- falsos positivos, porque no es capaz de distin-
suales. Los pacientes con enfermedad coro- guir entre la oxihemoglobina y la carboxihemo-
naria pueden presentar angina o infarto del globina.
miocardio.
NIVELES ESPECÍFICOS
Sobrevivientes de serias intoxicaciones pue-
den sufrir numerosas secuelas neurológicas Es necesario obtener una concentración es-
compatibles con daño hipóxico isquémico. pecífica de carboxihemoglobina como se de-
termina en la Tabla No. 1. La persistencia de
La exposición durante el embarazo puede re- hemoglobina fetal puede producir niveles ele-
sultar en muerte fetal. vados falsos de carboxihemoglobina en san-
gre en infantes jóvenes.

DIAGNÓSTICO Otros estudios de laboratorio deben incluir


electrolitos, glucosa, BUN, creatinina, ECG y
El diagnóstico no es difícil si hay una historia prueba de embarazo. En el electrocardiogra-
de exposición, por ejemplo en individuos en- ma se puede observar alteraciones de la onda

TABLA No. 1.

Concentración de monóxido de carbono Carboxihemoglobina % Síntomas


Menos de 35 ppm (cigarrillo) 5 Ninguno o cefalea leve.
0,005% (50 ppm) 10 Cefalea leve, disnea de grandes esfuerzos,
vasodilatación cutánea.
0,01% (100 ppm) 20 Cefalea pulsátil, disnea de moderados
esfuerzos.
0,02% (200 ppm) 30 Cefalea severa, irritabilidad, fatiga, visión
borrosa.
0,03-0,05% (300-500 ppm) 40-50 Cefalea, taquicardia, náuseas, confusión,
letargia, colapso, respiración de Cheyne-
Stokes.
0,08-0,12% (800-1200 ppm) 60-70 Coma, convulsiones, falla respiratoria y
cardíaca.
0,19% (1900 ppm) 80 Muerte.

1300
CAPÍTULO XIII: INTOXICACIÓN POR MONÓXIDO DE CARBONO

T, depresión del segmento ST, taquicardia nistrar el oxígeno por tubo endotraqueal. El
sinusal y fibrilación ventricular. tratamiento se lleva hasta alcanzar niveles de
carboxihemoglobina menores de 5%.

ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
TRATAMIENTO
• Retirar a la víctima del área de exposición. INTERDISCIPLINARIO
• Si hay disponibilidad, colocar oxígeno por
máscara o cánula lo más pronto posible. CÁMARA HIPERBÁRICA PARA AUMENTAR
• No dar alimentos o bebidas, por el riesgo LA ELIMINACIÓN, CON EL EQUIPO
de broncoaspiración. HUMANO Y TECNOLÓGICO ADECUADOS
• Trasladar inmediatamente a un centro hos-
pitalario. El oxígeno hiperbárico al 100% a 2 atmósfe-
ras de presión puede aumentar la eliminación
de CO (la vida media se reduce a 20-30 mi-
TRATAMIENTO nutos). Es conveniente utilizarlo en pacientes
con intoxicación severa que no respondan
MEDIDAS DE EMERGENCIA Y SOPORTE fácilmente al oxígeno a presión atmosférica,
o en mujeres embarazadas o en recién naci-
• Mantener la vía aérea y la ventilación. Si dos, dondequiera que esté listo y disponible
también ha ocurrido inhalación de humo, el acceso a la cámara. Sin embargo, el tras-
considerar la intubación rápida para prote- porte a larga distancia de un paciente inesta-
ger la vía aérea. ble para tratamiento con cámara hiperbárica
• Líquidos endovenosos y corrección de puede ser riesgoso.
hipotensión, que se presenta con alta fre-
cuencia en este tipo de intoxicación.
• Tratar el coma y las convulsiones. CRITERIOS DE REFERENCIA
• Monitorización continua electrocardiográ-
fica por varias horas después de la exposi- En casos de intoxicación severa se debe re-
ción. mitir a un centro hospitalario de alta compleji-
• Debido a que el humo contiene a veces dad que cuente con una unidad de cuidado
algunos otros gases tóxicos, considerar la intensivo con facilidades para soporte ventila-
posibilidad de intoxicación por cianuro, pre- torio y manejo integral intensivo. En casos muy
sencia de metahemoglobinemia y daño por graves remitir al centro hospitalario que cuente
gases irritantes. con cámara hiperbárica.

DROGAS ESPECÍFICAS
PRONÓSTICO
Administrar oxígeno en la concentración más
alta posible (100%). Oxígeno aspirado al La exposición prolongada a altas concentra-
100% tiene una velocidad de eliminación de ciones de CO, que lleve a un valor de carboxi-
CO a partir de la hemoglobina de aproxima- hemoglobina mayor de 50%, produce hipoxia
damente una hora, comparado con seis ho- tisular, lo que ocasiona lesiones graves del sis-
ras en habitación aireada. Usar la máscara o tema nervioso central y periférico. Si el pa-
el flujo de oxígeno alto con reservorio o admi- ciente sobrevive se pueden observar déficits

1301
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

neuropsicológicos (disminución del coeficiente Accidentes laborales pueden presentarse en


de inteligencia, pérdida de la memoria, labili- minas subterráneas o en espacios cerrados
dad emocional), lesiones extrapiramidales donde se presente combustión de hidrocar-
(parkinsonismo asociado con lesiones irrever- buros (industrias, garajes, talleres), lo que
sibles del globus palidus), leucoencefalopatía exige programas eficientes de salud ocupa-
y déficits motores o sensitivos diversos según cional en beneficio de los trabajadores.
la gravedad de la lesión. También se han ha-
llado lesiones en el sistema cardiovascular
(daño miocárdico, necrosis de músculos papi- LECTURAS RECOMENDADAS
lares, insuficiencia cardiaca) lo cual requiere
monitoreo permanente durante el evento 1. Rucker J, Tesler J, Fedorko L, et al. Normocapnia
agudo. improves cerebral oxygen delivery during conven-
tional oxygen therapy in carbon monoxide-exposed
research subjects. Ann Emerg Med 2002; 40:611-8.
2. Weaver LK, Hopkins RO, Chan KJ, et al.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN Hyperbaric oxygen for acute carbon monoxide
poisoning. N Engl J Med 2002; 347:1057-67.
En eventos fatales de causa voluntaria se tra- 3. Mott JA, Wolfe MI, Alverson CJ, et al. National
ta generalmente de suicidas que recurren a vehicle emissions policies and practices and
declining US carbon monoxide-related mortality.
utilizar carros que liberen CO al estar encen-
JAMA 2002; 288:988-95.
didos en recintos cerrados. También puede 4. Cunnington AJ, Hormbrey P. Breath analysis to
ocurrir un homicidio en estas circunstancias. detect recent exposure to carbon monoxide.
Es muy difícil controlar este tipo de eventos, Postgrad Med J 2002; 78:233-7.
pues son premeditados. 5. Annane D, Chevret S, Jars-Guincestre C, et al.
Prognostic factors in unintentional mild carbon
Lo lamentable son los accidentes que pueden monoxide poisoning. Intensive Care Med 2001;
27:1776-81.
ser prevenidos, como es el caso de las estu- 6. Hampson NB, Zmaeff JL. Outcome of patients
fas de gas o gasolina prendidas por periodos experiencing cardiac arrest with carbon monoxide
prolongados de tiempo en recintos cerrados poisoning treated with hyperbaric oxygen. Ann
o los calentadores de gas llamados “calenta- Emerg Med 2001; 38:36-41.
dores de paso”, en recintos mal ventilados, 7. Snashall D, Williams N. Carbon monoxide
que han dejado en muestro medio varias poisoning. Doctors should inform employment
Medical Advisory Service. BMJ 2000; 320:804.
muertes, documentadas en los archivos del 8. Takeuchi A, Vesely A, Rucker J, et al. A simple “new”
Instituto de Medicina Legal. Esto debería obli- method to accelerate clearance of carbon monoxi-
gar a las autoridades a denunciar lo sucedido de. Am J Respir Crit Care Med 2000; 161:1816-9.
para tomar medidas de prevención y educar 9. Tomaszewski C. Carbon monoxide poisoning.
a la comunidad. Postgrad Med 1999; 105:39-40.

1302
CAPÍTULO XIV: INTOXICACIÓN POR ACETAMINOFÉN

CAPÍTULO XIV

Intoxicación por acetaminofén

María Luisa Cárdenas, MD. MSc Farmacología


Profesor Asistente
Universidad Nacional de Colombia

GENERALIDADES
Y EPIDEMIOLOGIA

E l acetaminofén es uno de los analgésicos


de más amplio uso debido a su caracte-
rística de ser un medicamento de venta libre
macromoléculas hepáticas, lo que produce
daño hepático. La sobredosis durante el em-
barazo ha sido asociada con muerte fetal
(OTC). Las intoxicaciones por acetaminofén y aborto espontáneo.
se presentan especialmente en la población
infantil por sobredosis, debido al poco cono-
cimiento en la población general, debido a que DOSIS TÓXICA
se parte de la supuesta teoría de la “baja toxi-
cidad” del acetaminofén. • Adultos 6 –7 g.
• Dosis letal 13-25 g.
• Niños: En ingestiones agudas, 150 – 200
FISIOPATOLOGÍA mg/kg.

Este analgésico derivado de la fenacetina, se El riesgo de hepatotoxicidad se incrementa si


absorbe muy bien por vía oral y se logran con- el paciente es alcohólico crónico o si toma
centraciones máximas a los 30–60 minutos; otros medicamentos que incrementen la acti-
se une poco a las proteínas plasmáticas. Es vidad del sistema de citocromo- oxidasas,
metabolizado a nivel hepático por el citocromo como lanticonvulsivantes e isoniazida. En la
p-450 a metabolitos inactivos. Se produce un desnutrición se disminuye el glutation corpo-
3–5% de un metabolito menor muy activo que ral, por lo cual ante la sobredosis de acetami-
es la N – acetil- para-benzoquinoneimina nofén no es posible eliminar el NAPQI, meta-
(NAPQI), responsable de la lesión hepática y bolito sumamente tóxico.
renal. Menos de 5% se excreta en la orina sin
cambios.
CLÍNICA
Normalmente la NAPQI es rápidamente eli-
minada por el glutatión en el hígado. Sin em- MANIFESTACIONES TEMPRANAS
bargo, en sobredosis, la producción del meta-
bolito tóxico excede la capacidad del glutatión Usualmente no se presentan síntomas o son
y el metabolito reacciona directamente con inespecíficos como anorexia, náusea o vómito.

1303
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DESPUÉS DE 24–48 HORAS tro horas antes o si se trata de una presenta-


ción de liberación retardada.
Cuando el tiempo de protrombina (PT) o los
niveles de transaminasas aumentan, se hace Lavado gástrico en caso de no haberse admi-
evidente la necrosis hepática. Al instaurarse nistrado en forma inmediata el carbón activado.
la falla hepática aguda, puede evolucionar a
encefalopatía y muerte. La presencia de ence- MANEJO ESPECÍFICO
falopatía, acidosis metabólica y un aumento
continuo de PT ensombrece el pronóstico. Aplicación de N-acetilcisteína con una dosis
Ocasionalmente ocurre falla renal aguda, a de carga de 140 mg/ Kg que debe ser admi-
veces concomitante con la falla hepática nistrada en las primeras 8–10 horas para lo-
grar el máximo beneficio de protección hepá-
tica, aunque se puede administrar después de
AYUDAS DIAGNÓSTICAS las 12 horas, incluso hasta las 24 horas o si el
paciente evoluciona hacia un incremento en
• Historia clínica – antecedentes farmacoló- el riesgo de toxicidad hepática determinado
gicos. por el monitoreo de los niveles de acetami-
• Glucemia. nofén.
• BUN.
• Creatinina. La dosis de mantenimiento de N-acetilcisteina
• Electrolitos: sodio, potasio, cloro, calcio. es de 70 mg/kg cada cuatro horas por 17 do-
• Transaminasas. sis, lo que implica una duración de 72 horas.
• Tiempo de protrombina. Un buen parámetro para continuar o no la N-
• Análisis cuantitativo de acetaminofén en acetilcisteína son los valores de transamina-
plasma. Permite predecir el riesgo de de- sas y tiempo de protrombina normales. Si las
sarrollar hepatotoxicidad, mediante la ayu- pruebas de función hepática no tienen un va-
da del Nomograma de Rumack – Matthew. lor normal se continúa el antídoto. El vómito
• Gases arteriales. puede interferir con la administración oral de
la N-acetilcisteína, por lo que se puede hacer
necesaria la administración de antiemético y
TRATAMIENTO el uso de sonda nasogástrica para la admi-
nistración de dicha droga.
TRATAMIENTO PREHOSPITALARIO
MEDIDAS QUE INCREMENTAN
La atención prehospitalaria incluye la induc- LA ELIMINACIÓN
ción del vómito si el paciente está conciente.
Administrar carbón activado; una vez admi- La hemodiálisis se debe utilizar en caso de
nistrado éste se debe controlar el vómito. insuficiencia renal, pero no substituye el antí-
doto.
TRATAMIENTO HOSPITALARIO
En cuanto a la hemoperfusión no ha sido bien
Disminución de la absorción definido su uso, pero no sustituye el uso de
N-acetilcisteína, y si la terapia con el antídoto
Administración de carbón activado, sólo si la disminuye los niveles séricos, no es necesa-
ingestión del acetaminofén ocurrió tres a cua- rio realizarla.

1304
CAPÍTULO XIV: INTOXICACIÓN POR ACETAMINOFÉN

MANEJO SINTOMÁTICO Informar adecuadamente a los pacientes para


evitar la dosificación a voluntad propia del
Manejar el vómito con metoclopramida, para acetaminofén y mucho menos si se trata de
facilitar la administración oral del antídoto. presentaciones en las que se combina con
opioides.
Si se ha instaurado ya la encefalopatía se
debe administrar manitol y restringir la utiliza-
ción de líquidos RECOMENDACIONES SOBRE
ACTUALIZACIÓN E INVESTIGACIÓN
Administración de vitamina K si el tiempo de
protrombina se ha prolongado Se debe intensificar la farmacovigilancia so-
bre los casos de intoxicaciones con estos
CRITERIOS DE REFERENCIA medicamentos para conocer realmente cuál
es la prevalencia y la incidencia de la intoxi-
El paciente se mantendrá con control estricto cación por acetaminofén.
de la función hepática y renal. Se vigila y co-
rrige el estado ácido básico de ser necesario.
De acuerdo a las condiciones del paciente se LECTURAS RECOMENDADAS
puede requerir el manejo en la Unidad de
1. Buckley NA, White IM, O’Connell DL, et al. Oral
Cuidado Intensivo.
or intravenous N-acetylcysteine: which is the
treatment of choice for acetaminophen (paraceta-
mol) poisoning? J Toxicol Clin Toxicol 1999;
PRONÓSTICO 37:759-767.
2. Clarke S, Herren K. Towards evidence based
Si se ha instaurado la falla hepática aguda emergency medicine: best BETs from the Man-
chester Royal Infirmary. Oral or intravenous
acompañada de encefalopatía y acidosis el
antidote for paracetamol overdose. Emerg Med J
pronóstico es desfavorable. 2002; 19:247-248.
3. Darf RC, Kuffner E. Alcohol and acetaminophen
hepatotoxicity. Arch Intern Med. 2003; 163:244-245.
PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN 4. Grierson R, Green R, Sitar DS, et al. Gastric lavage
for liquid poisons. Ann Emerg Med 2000; 35:435-439.
5. Gyamlani GG, Parikh CR. Acetaminophen toxicity: sui-
Este grupo de medicamentos debe ser alma- cidal vs. accidental. Crit Care Med 2002; 6:155-159.
cenado en sitios de difícil acceso, fuera del 6. Kurtovic J, Riordan SM. Paracetamol induced
alcance de los niños o personas con ideas hepatotoxicity at recommended dosage. J Intern
suicidas. Med 2003; 253:240-243.

1305
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XV

Intoxicaciones farmacológicas frecuentes

Jorge Salcedo, MD FACEP


Jefe Departamento de Urgencias
Fundación Santa Fe de Bogotá

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales
Federación Panamericana de Asociaciones (Escuelas) de Facultades de Medicina

INTRODUCCIÓN EPIDEMIOLOGÍA

E n esta guía se tratan las intoxicaciones


farmacológicas más frecuentes que no
han sido revisadas en otras Guías para Ma-
Representa en los Estados Unidos 0,4% de
todos los ingresos hospitalarios. La prevalen-
cia de intoxicación es más alta en los pacien-
nejo de Urgencias. Se cubren los siguientes tes que se encuentran en unidades de cuida-
temas: dos intermedios. La mortalidad varía de acuer-
do a la población estudiada. La edad mayor
• Intoxicación por digoxina. de 80 años es un factor de riesgo indepen-
• Intoxicación por antagonistas del calcio. diente de asociación con muerte.

INTOXICACIÓN POR DIGOXINA ETIOLOGÍA


La digoxina hace parte del grupo de los glucó- La intoxicación por digoxina tiene múltiples
sidos cardíacos derivados de la planta Digitalis causas:
purpúrea. Es un inotrópico positivo que actúa • Sobredosis aguda.
a través de la inhibición de la bomba Na/K • Deterioro de la función renal.
ATPasa. Tiene propiedades antiarritmicas. Se • Hipomagnesemia.
utiliza en el tratamiento de la insuficiencia car- • Hipocalemia.
díaca congestiva y de la fibrilación auricular • Infarto de miocardio.
crónica. • Hipotiroidismo.
• Interacciones farmacológicas con amilori-
FARMACOCINÉTICA de, amiodarona, quinina, propafenona, etc.

La absorción por vía oral es de 70-80%. Se MANIFESTACIONES CLÍNICAS


une muy poco a las proteínas plasmáticas. El
metabolismo es hepático con eliminación uri- Los síntomas se pueden producir en casi to-
naria. dos los sistemas del organismo.

1306
CAPÍTULO XV: INTOXICACIONES FARMACOLÓGICAS FRECUENTES

Sistema Cardiovascular plementario. Se debe hacer monitoría del rit-


• Palpitaciones. mo cardíaco y obtener un acceso venoso.
• Síncope.
• Disnea. Si se presenta bradiarritmia con inestabilidad
hemodinámica esta indicado el uso de atro-
Sistema nervioso central pina. La lidocaína se administra en caso de
• Confusión y somnolencia. taquicardia ventricular.
• Mareo.
• Agitación, alucinaciones.
• Cefalea. TRATAMIENTO
• Parestesias.
INTERRUPCIÓN DE LA ABSORCIÓN
Sistema ocular
• Alteración de la percepción del color. En la intoxicación aguda se utiliza carbón ac-
• Visión borrosa o diplopía. tivado en una dosis de 1g/kg de peso. También
• Fotofobia. se recomienda la administración de catártico
salino (Sulfato de magnesio 40 mg). La coles-
Sistema gastrointestinal tiramina inhibe la absorción al unirse en for-
• Naúsea, anorexia. ma irreversible a la digoxina. La dosis es de
• Diarrea. 4g cada seis horas.
• Dolor abdominal.
MANEJO DE LAS ARRITMIAS
Se puede encontrar inestabilidad hemodinámi-
ca y cualquier tipo de arritmia. Las contraccio- • La bradiarritmia con estabilidad hemodiná-
nes ventriculares prematuras son la forma más mica requiere de observación y monitoría
frecuente de alteración del ritmo en los pacien- electrocardiográfica. Cuando se presenta
tes intoxicados con digoxina. También es co- inestabilidad hemodinámica, el tratamien-
mún encontrar bradicardia sinusal y fibrilación to se hace con atropina. La dosis es de 0,4
auricular con respuesta ventricular controlada. mg IV que se puede repetir cada hora.

EXÁMENES COMPLEMENTARIOS • Las arritmias supraventriculares con esta-


bilidad hemodinámica no requieren de nin-
Niveles de digoxina: no se asocian con la gra- gún tratamiento farmacológico. Si aparece
vedad de la intoxicación. Son útiles para con- inestabilidad hemodinámica es necesario
trolar el tratamiento junto con el valor de administrar lidocaína o fenitoína. La dosis
potasio sérico y el electrocardiograma (ECG). de lidocaína es 1-3 mg/kg de peso IV.

Electrolitos séricos: La hiperkalemia (potasio • En caso de taquicardia ventricular puede


sérico mayor de 5 mEq/L es un indicador de utilizarse magnesio. Se inicia con un bolo
intoxicación grave. de 2 g IV seguido de una infusión continúa
de 1-2 g/hora. Es conveniente vigilar el ni-
ATENCIÓN PREHOSPITALARIA vel sérico de magnesio cada dos horas. El
objetivo es mantener el magnesio sérico
En el paciente con sospecha de intoxicación entre 4-5 mEq/L.
por digoxina es necesario utilizar oxígeno su-

1307
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DESEQUILIBRIO HIDROELECTROLÍTICO micos. Su utilidad clínica incluye el manejo de


la hipertensión, de algunas arrtimias, de la
La hiperkalemia y la hipomagnesemia son las acalasia y del vasoespasmo de la hemorra-
anormalidades más comunes de los electro- gia subaracnoide.
litos en la intoxicación por digital.
FARMACOCINÉTICA
La hiperkalemia se trata cuando el nivel de
potasio es superior a 5 mEq/L. Puede utilizar- Los inhibidores de los canales de calcio se
se bicarbonato de sodio o solución polarizante absorben completamente por vía oral. La
(insulina glucosa). No es recomendable utilizar unión a las proteínas es muy alta. El inicio de
calcio porque puede inducir la aparición de acción aparece durante la primera hora des-
taquicardia o fibrilación ventricular. pués de la ingesta.

ANTÍDOTO FARMACODINAMIA

El antídoto es el anticuerpo contra la digoxina, Estos medicamentos inhiben la entrada de


que es el fragmento fab de la inmunoglobulina. calcio a la célula mediada por los canales len-
Las indicaciones de su utilización son las si- tos dependientes de voltaje por lo cual dismi-
guientes: nuyen la conductividad del nodo auricular y
auriculoventricular. También impiden el flujo
• Arritmias asociadas con inestabilidad de calcio por lo canales rápidos durante la
hemodinámica. meseta del potencial de acción lo que produ-
• Alteración del estado de conciencia atribui- ce reducción de la contractilidad del miocardio
da a la intoxicación con digoxina y relajación del músculo liso.
• Hiperkalemia con potasio sérico mayor de
6 mEq/L. MANIFESTACIONES CLÍNICAS
• Nivel sérico de digoxina mayor de 10 ng/mL.
• Dosis del medicamento mayor de 10 mg Las manifestaciones cardíacas incluyen blo-
en adultos o de 0,3 mg/kg de peso. queo auriculoventricular, hipotensión y bradi-
cardia.
La dosis se calcula de acuerdo a la cantidad
ingerida de digoxina así: Número de ampo- El estado de conciencia puede estar dismi-
llas= Cantidad ingerida*0,8/0,5 nuido. Las convulsiones se asocian con hipo-
tensión. Otros síntomas del sistema nervioso
Ejemplo: 30 pastillas de digoxina de 0,25 mg central son mareo y coma.
30*0,25*0,8/0,5= 12 ampollas.
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
La dosis se administra en 30 minutos.
Glucemia: se encuentra hiperglucemia debi-
do a que los antagonistas del calcio inhiben
INTOXICACIÓN la liberación de insulina.
POR ANTAGONISTAS DEL CALCIO
Gases arteriales: puede aparecer acidosis por
Los antagonistas de los canales de calcio son la producción excesiva de ácido láctico en la
parte del grupo IV de medicamentos antiarrit- intoxicación con inhibidores del calcio.

1308
CAPÍTULO XV: INTOXICACIONES FARMACOLÓGICAS FRECUENTES

Radiografía de tórax: es posible observar sig- LECTURAS RECOMENDADAS


nos de falla cardiaca.
1. Boyer E, Shannon M. Treatment of calcium
MANEJO PREHOSPITALARIO channel blocker with insulin infusion. N Engl J Med
2001; 344:1721-1722.
2. Isbister GK. Delayed asystolic arrest after diltiazam
El transporte rápido del paciente debe ser una
overdose. Emerg Med J 2002;19:355-7
prioridad en los casos de intoxicación por inhi- 3. Juurlink DN, Mamdani M, Kopp A, et al. Drug-drug
bidores del calcio. El uso de glucagon 5-15 interactions among elderly patients hospitalized for
mg IV esta indicado si aparece bradicardia o drug toxicity. JAMA 2003; 289:1652-8. Eddleston
hipotensión. Si la hipotensión persiste des- M, Rajapakse S, Rajakanthan, et al. Anti-digoxin
pués de utilizar el glucagon es necesario utili- Fab fragments in cardiotoxicity induced by
zar cloruro de calcio. ingestion of yellow oleander: a randomised
controlled trial.‘Lancet 2000; 355:967-72.
4. Kenny J. Treting overdose with calcium channel
blockers. BMJ 1994;308:992-3
TRATAMIENTO 5. Ma G, Brady WJ, Pollack M, et asl.
Electrocardiographic manifestations: digitalis
INTERRUPCIÓN DE LA ABSORCIÓN toxicity. J Emerg Med 2001; 20:145-52.
6. Wofford JL, Ettinger WH. Risk factors and
El lavado gástrico y el carbón activado son manifestations of digoxin toxicity in the elderly. Am
útiles en el manejo inicial. La dosis de carbón J Emerg Med 1999; 9(Suppl 1):11-5
activado es la misma que la usada en la in-
toxicación por digoxina.

ANTÍDOTO

El antídoto es el calcio. La dosis es de 10 mL


de cloruro de calcio al 10% o 30 mL de
gluconato de calcio. Los bolos se repiten cada
15-20 minutos, hasta completar 4-5 dosis.

1309
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO XVI

Intoxicación por cumarinicos

Iván Martínez, MD
Oficina de Recursos Educacionales.
Federación Panamericana de Asociaciones
de Facultades (Escuelas) de Medicina.
Bogotá

L a warfarina es el anticoagulante oral más


utilizado. Es parte integral del tratamiento
de varias condiciones, tales como trombosis
agulable por inhibición de la Proteína C, la cual
tiene propiedades anticoagulantes. Para lo-
grar efectividad, la terapia puede demorarse
venosa profunda, fibrilación auricular crónica hasta tres o cuatro días, de acuerdo al tiempo
y miocardiopatía dilatada. de degradación de los factores dependientes
de vitamina K.
También se cuenta con cumarinícos de acción
prolongada utilizados como raticidas. Pueden FARMACOCINÉTICA
producir intoxicación en menores de edad, pro-
duciendo una profunda y prolongada antico- La biodisponibilidad de la warfarina por vía oral
agulación con elevado riesgo de sangrado. es cercana a 100%. Se une fuertemente a las
proteínas plasmáticas, de forma especial a la
albúmina. Es distribuida al hígado, pulmón,
FISIOPATOLOGÍA bazo y riñón. Atraviesa la barrera placentaria
con efectos teratogéncicos documentados en
MECANISMO DE ACCIÓN humanos.

Los cumarinicos inhiben la síntesis hepática La duración del efecto anticoagulante de la


de los factores de coagulación dependientes warfarina después de una sola dosis es de 5-
de la vitamina K. La vitamina K es coadyu- 7 días. Es metabolizada por el hígado y elimi-
vante en la elaboración de los factores II, VII, nada por la bilis principalmente. La excreción
IX, X y del anticoagulante proteína C. de este medicamento puede verse alterada
en pacientes con edad avanzada o falla he-
El tiempo de acción de la warfarina para inhi- pática.
bir a cada uno de los factores es el siguiente:
• Factor II : 60 horas. Numerosos medicamentos interaccionan con
• Factor VII : 4-6 horas. la warfarina, pudiendo inhibir o potenciar su
• Factor IX : 24 horas. acción, así:
• Factor X : 48-72 horas. • Inhibición del metabolismo de la warfarina
(aumentan el riesgo de sangrado):
Proteína C : Al iniciar tratamiento con warfa- - Amiodarona.
rina, se puede presentar un estado hiperco- - Cimetidina.

1310
CAPÍTULO XVI: INTOXICACIONES POR CUMARINICOS

- Metronidazol. En la historia clínica el principal síntoma es el


- Omeprazol. sangrado. La aparición de hemorragia eviden-
- Alopurinol. te sólo aparece 24 horas después de ingerida
- Ingesta de alcohol. la sustancia. Cuando el sangrado es oculto
• Aumento del metabolismo de la warfarina no se encuentran signos físicos, lo que puede
(disminuyen el efecto terapéutico): llevar al paciente a una rápida descompensa-
- Fenobarbital. ción hemodinámica con retardo en la instau-
- Fenitoína. ración del tratamiento.
- Rifampicina.
- Griseofulvina. El espectro de la intoxicación es amplio. Las
- Carbamazepina. manifestaciones más comunes incluyen equi-
mosis, petequias, hemorragia subconjuntival,
epistaxis, sangrado vaginal y hematuria.
EPIDEMIOLOGÍA
También pueden aparecer complicaciones
La intoxicación accidental es más frecuente graves como hemorragia gastrointestinal ma-
en niños que tienen acceso a raticidas con siva y sangrado intracerebral.
cumarínicos. En adultos la sobredosis tera-
péutica es la más común, sobre todo en ancia- EXÁMENES DE LABORATORIO
nos anticoagulados que, además, reciben va-
rios medicamentos para enfermedades En todos los pacientes con sospecha de intoxi-
crónicas. cación por cumarinicos se debe medir el tiem-
po de protrombina (PT). Este se eleva uno o
dos días después de la ingesta del fármaco.
CUADRO CLÍNICO Y DIAGNÓSTICO La medición se hace diariamente hasta que
el valor retorne a cifras normales y el sangra-
Se debe obtener una historia clínica dirigida a do haya cesado.
conocer la cantidad de warfarina ingerida, así
como la prescripción de otros medicamentos No es necesario solicitar niveles de warfarina
que puedan alterar la acción cumarínica. En o de factores de la coagulación vitamina K-
el caso de intoxicación accidental con raticidas dependientes. Se debe reservar sangre de tipo
es conveniente revisar la etiqueta del empa- específico en caso de que la hemorragia sea
que para conocer la concentración y potencia abundante.
de la sustancia ingerida.
La tomografía axial computadorizada (TAC)
La dosis tóxica es muy variable: es útil en los casos en que se sospeche san-
• Dosis menores de 10-20 mg generalmen- grado en el sistema nervioso central.
te no producen intoxicación grave.
• La ingesta crónica y repetida de pequeñas
cantidades puede generar anticoagulación ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
profunda con alto riesgo de sangrado.
• En pacientes con falla hepática, desnutri- La atención prehospitalaria incluye iniciar
ción o alteraciones de la coagulación, do- manejo del ABC (vía aérea, respiración, cir-
sis mínimas son capaces de producir san- culación) y la administración de carbón acti-
grado importante. vado a una dosis de 1 g/kg de peso corporal.

1311
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TRATAMIENTO • Algunos pacientes ingieren otras sustan-


cias en un intento suicida: es necesario
El tratamiento esta encaminado a encontrar identificarlas y tratarlas en forma apropiada.
posibles sitios de sangrado y a la interrupción • Evitar la utilización de medicamentos que
del efecto del cumarínico. puedan potenciar el efecto del cumarínico.
Es importante recordar las drogas que inhi-
Es necesario evaluar la estabilidad hemodiná- ben el metabolismo de la warfarina para
mica del paciente. Si el individuo se encuen- no usarlas.
tra inestable con hipotensión y sangrado pro- • La vitamina K se administra cuando se ha
fuso, se debe iniciar tranfusión de plasma fres- documentado anticoagulación por la prue-
co congelado, que cuenta con todos los fac- ba de PT. La dosis es de 50-200 mg en
tores de la coagulación. La dosis recomenda- adultos; en niños es 1-5 mg vía oral, o 1-
da es de 10 mL/kg de peso. 10 mg IM en casos severos. No es necesa-
rio utilizar vitamina K en forma profiláctica.
La mayoría de las intoxicaciones agudas por • Si se presenta hemorragia masiva el trata-
cumarinícos no está asociada con sangrado miento se hace con plasma fresco conge-
en el momento de la evaluación inicial en ur- lado. La vitamina K no tiene utilidad en el
gencias, a menos que la ingesta se haya rea- sangrado agudo, debido a que el comien-
lizado 24 horas antes del ingreso. El manejo zo de su acción tarda al menos seis horas.
en estos casos es el siguiente:
La intoxicación crónica se presenta en pacien-
• Solicitar PT/INR de base y medirlo cada tes que están recibiendo cumarínicos como
día. parte del tratamiento de una enfermedad cró-
• Administrar carbón activado si no se reali- nica. La evaluación de estos pacientes se hace
zó en la atención prehospitalaria. mediante examen físico la medición del PT/
INR, como se observa en la siguiente tabla:

PT/INR Sangrado Conducta


<6 No Suspender warfarina por 2-3 días. Reiniciar cuando el
PT/INR se acerca al nivel terapéutico
>6 - <10 No Vitamina K 1 mg IM
>10 - <15 No Vitamina K 3 mg IM
>15 Sí Vitamina K 10 MgPlasma fresco congelado

Si el paciente tiene necesidad de anticoagula- COMPLICACIONES


ción continua se puede utilizar heparina como
medida temporal mientras se tratan los efec- La necrosis cutánea es una complicación rara
tos de la warfarina. del tratamiento con warfarina. Generalmente
se presenta entre el octavo y el undécmio día
de terapia, con mayor frecuencia en mujeres

1312
CAPÍTULO XVI: INTOXICACIONES POR CUMARINICOS

y en pacientes con deficiencia previa de pro- LECTURAS RECOMENDADAS


teína C. El cuadro clínico incluye dolor inten-
so en la cintura, muslos, y senos con signos 1. Chua JD, Friedenberg WR. Superwarfarin
de inflamación local. poisoning. Arch Intern Med 1998; 158:1929-1932.
2. Mullins ME, Brands CL, Daya MR. Unintentional
pediatric superwarfarin exposures: do we really
El tratamiento consiste en descontinuar la
need a prothrombin time? Pediatrics 2000; 105:
warfarina en forma inmediata. Si el paciente 402-404.
requiere anticoagulación se puede utilizar
heparina en forma transitoria.

1313
CAPÍTULO I: DELIRIUM

CAPÍTULO 1

Delirium

Ana Millán C, MD
Jefe, Sección de Psiquiatría
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

E l delirium es un síndrome que incluye al-


teraciones de la conciencia, alteraciones
de la cognición (pensamiento, percepción y
a intervalos cortos y puede llegar a invertir el
ciclo circadiano.

memoria), dificultades de la orientación y cam-


bios en la actividad motora y en el ciclo sue- CAUSAS
ño-vigilia.
POR ENFERMEDAD MÉDICA GENERAL

Establecer si existe una enfermedad médica


CUADRO CLÍNICO
de base y si el delirium se relaciona, para lo
Las alteraciones en la percepción incluyen ilu- cual se requiere una adecuada evaluación.
siones, alucinaciones que pueden ser visua- Trastornos del Sistema Nervioso Central:
les, auditivas, gustativas o táctiles. Puede ha- • Trauma craneoencefálico.
ber ideas delirantes con contenido persecu- • Convulsiones.
torio, así como desorganización y fragmenta- • Estado post-ictal.
ción del pensamiento. En la memoria se pre- • Enfermedad vascular.
senta alteración del registro, de la retención y • Enfermedad degenerativa.
del recuerdo, y pueden existir confabulacio-
nes. Hay dificultades para enfocar, mantener Enfermedad Metabólica:
y cambiar la atención. • Falla renal.
• Falla hepática.
En la parte motora se encuentran dos tipos de • Anemia.
delirium, el hiperactivo y el hipoactivo. El pri- • Hipoxia.
mer tipo cursa con aumento de la actividad mo- • Hipoglucemia.
tora, alucinaciones, irritabilidad, inquietud, de- • Deficiencia de tiamina.
lirios, taquilalia. El delirium hipoactivo cursa con • Diabetes.
disminución de la actividad motora, somnolen- • Desequilibrio hidroelectrolítico.
cia, apatía, letargo, confusión y bradilalia.
Enfermedades Cardiopulmonares:
En cuanto al sueño, insomnio mixto (de con- • Infarto de miocardio.
ciliación y reconciliación), el paciente duerme • Falla cardiaca congestiva.

1317
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Arritmia cardiaca. MÚLTIPLES ETIOLOGÍAS


• Shock.
• Falla respiratoria. Especialmente en ancianos y en enfermos crí-
ticos, el delirium puede tener múltiples etiolo-
Enfermedades sistémicas: gías; el 56% de los pacientes ancianos con
• Intoxicación o abstinencia por sustancias. delirium tiene una única y probable causa; el
• Infección. restante 44% tiene un promedio de 2,8 etiolo-
• Neoplasias. gías por paciente. Los pacientes ancianos tie-
• Post - operatorios. nen mayor predisposición para presentar deli-
rium, es así como puede ocurrir en 15- 50%
de los individuos mayores de 65 años.
USO O ABSTINENCIA A SUSTANCIAS

Las sustancias incluyen los agentes con y sin ETIOLOGÍAS NO ESPECIFICADAS


propiedades psicoactivas.
Ocasionalmente no aparece una causa clara.
Drogas de abuso: Puede haber casos en que se desconozca la
• Alcohol. ingesta de alguna sustancia o bien que haya
• Anfetaminas. una causa muy rara como una coagulación
• Cannabis. intravascular diseminada (CID).
• Cocaina.
• Inhalantes.
• Opioides. EVALUACIÓN DEL PACIENTE CON
• Sedativos-Hipnóticos. DELIRIUM
Medicamentos: Estado Físico:
• Anestésicos. • Historia.
• Analgésicos. • Examen físico y neurológico.
• Agentes antiasmáticos. • Revisar signos vitales y record anestésico
• Anticonvulsionantes. si es postoperativo.
• Antihistamínicos. • Revisar los registros médicos.
• Hipotensores y medicaciones- cardiovas- • Revisar medicaciones y correlacionar- con
culares. cambios de conducta.
• Antimicrobianos.
• Antiparkinsonianos. Estado mental:
• Corticosteroides. • Entrevista.
• Medicamentos gastrointestinales. • Test cognoscitivos.
• Relajantes musculares.
• Inmunosupresores. Pruebas de laboratorio:
• Litio. • Química: glicemia, electrolitos, BUN,
creatinina, albúmina, función hepática.
Toxinas • Hemograma.
• Anticolinesterasa. • Electrocardiograma.
• Insecticidas organofosforados. • Radiografía de tórax.
• Monóxido de carbono. • Gases arteriales.
• Dióxido de Carbono. • Uroanálisis.

1318
CAPÍTULO I: DELIRIUM

PRUEBAS ADICIONALES día, de ser necesario inmovilizar, vigilar


(A CONSIDERACIÓN MÉDICA) riesgo de caída y autoagresión.
2. Evitar estímulos medio ambientales fuer-
• Urocultivo. tes, colocar música suave.
• VDRL, metales pesados en sangre,niveles 3. Orientación: colocar a la vista del paciente
de Vitamina B12, ácido fólico, ANAS, porfi- un calendario y un reloj que le sean familia-
rinas en orina, amonemia, VIH. res e instruir a la familia sobre orientarlo
• Hemocultivos. continuamente (decirle donde está y la fe-
• Niveles de medicamentos en sangre (digo- cha).
xina, teofilina, fenobarbital). 4. Permitirle fotos de familiares y objetos co-
• Punción lumbar. nocidos en la habitación.
• TAC cerebral o RNM cerebral. 5. En el día permitir luz natural (ventana con
• Electroencefalograma. cortinas abiertas) y en la noche una luz muy
suave para reducir la ansiedad.
6. Instruir a enfermería sobre este manejo.
TRATAMIENTO
TRATAMIENTO DE LA CAUSA LECTURAS RECOMENDADAS

1. Hipoglicemia: glucosa al 50% 50 ml IV. 1. Aldemir M, Ozen S, Kara IH, Sir A, Bac B.
2. Hipoxia o anoxia: oxígeno inmediato. Predisposing factors for delirium in the surgical
3. Hipertensión severa: manejo de emergen- intensive care unit. Crit Care 2001; 5:265-270.
2. American Psychiatric Association Guidelines for
cia hipertensiva.
the management of delirium. Am J Psychiatry
4. Abstinencia de alcohol: benzodiacepinas 1999;156:1S-20S.
(diazepam, alprazolam, lorazepam), tiami- 3. Bostwick JM. The many faces of confusion. Timing
na, glucosa, magnesio, vitaminas (ácido and collateral history often hold the key to diagno-
fólico y complejo B). sis. Postgrad Med 2000;108:60-2, 65-6, 71-2.
5. Desequilibrio hidro-electrolítico: manejo 4. Britton A, Russell R. Multidisciplinary team inter-
específico. ventions for delirium in patients with chronic
cognitive impairment. Cochrane Database Syst
Rev 2001;CD000395.
5. Cano C. Delirium. Universitas Médicas 2002;
MANEJO FARMACOLÓGICO 43:82-832.
6. Casarett DJ, Inouye SK. Diagnosis and
1. Haloperidol 2-5 mg IV cada 30 minutos management of delirium near the end of life. Ann
hasta remoción de síntomas. Dosis máxi- Intern Med 2001; 135:32-40.
ma: 30 mg/día. Monitorización por ECG. 7. Elie M, Rousseau F, Cole M, et al. Prevalence and
2. Otros antipsicóticos: olanzapina, risperi- detection of delirium in elderly emergency
dona, quetiapina. department patients. CMAJ 2000; 163:977-981.
8. Han L, McCusker J, Cole M, et al. Use of medica-
3. Benzodiacepinas: lorazepam 1-6 mg/día.
tions with anticholinergic effect predicts clinical
severity of delirium symptoms in older medical
inpatients. Arch Intern Med. 2001; 161:1099-1105.
MANEJO MEDIO AMBIENTAL 9. Inouye SK, Foreman MD, Mion LC, et al. Nurses’
recognition of delirium and its symptoms:
1. Garantizar la seguridad del paciente: per- comparison of nurse and researcher ratings. Arch
manecerá acompañado las 24 horas del Intern Med. 2001 Nov 12; 161:2467-2473.

1319
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

10. Inouye SK, Schlesinger MJ, Lydon TJ. Delirium: a 13. McCusker J, Cole M, Abrahamowicz M, Primeau
symptom of how hospital care is failing older F, Belzile E. Delirium predicts 12-month mortality.
persons and a window to improve quality of hos- Arch Intern Med 2002; 162:457-463.
pital care. Am J Med 1999; 106:565-573. 14. Meagher DJ. Delirium: optimising management.
11. Lawlor PG, Fainsinger RL, Bruera ED. Delirium at BMJ 2001; 322:144-149.
the end of life: critical issues in clinical practice 15. Tabet N, Howard R.Optimising management of
and research. JAMA 2000; 284:2427-2429. delirium. Patients with delirium should be treated
12. Martin E, Calvo E, García J. Delirium: diagnóstico with care. BMJ 2001; 322:1602-1603.
y tratamiento. Revista de la Facultad de Medicina 16. Tullmann DF. Assessment of delirium: another step
de la Universidad Nacional 1999; 47:163-70, forward. Crit Care Med 2001; 29:1481-143.

1320
CAPÍTULO II: CRISIS DE ANSIEDAD

CAPÍTULO II

Trastornos de pánico

Ana Millán, MD
Jefe, Sección de Psiquiatría
Fundación Santa Fe de Bogotá

DEFINICIÓN

E l DSMV-IV define ataque de pánico como


un tipo de ansiedad especial cuya dura-
ción suele ser breve. Se caracteriza por un
A. Los criterios 1 y 2 en forma obligatoria
1. Ataques de pánico recurrentes e ines-
perados
período discreto de intenso miedo o malestar 2. Al menos uno de los ataques ha sido
en cual hay cuatro o más de los siguientes precedido en el siguiente mes por
síntomas: alguno(s) de los siguientes eventos:
a. Preocupación persistente de sufrir otro
• Palpitaciones o taquicardia. ataque.
• Sudoración. b. Preocupación por las implicaciones o las
• Temblor. consecuencias del ataque.
• Sensación de ahogo. c. Cambios significativos en el comporta-
• Dolor precordial. miento relacionados con el ataque.
• Sensación de mareo, desequilibrio o des- B. Ausencia o presencia de agorafobia.
mayo. C. Los ataques de pánico no son debidos a
• Despersonalización. efectos fisiológicos del uso de sustancias
• Miedo de perder el control o de volverse o a una condición médica general como el
loco. hipertiroidismo.
D. Los ataques de pánico no son explicados
Así mismo, el DSMV-IV define la agorafobia por otros trastornos mentales como la fo-
como un tipo especial de ansiedad que se des- bia social, la fobia específica.
pierta en lugares o situaciones en donde es
difícil escapar o en las cuales no hay disponi- Según su intensidad el trastorno de pánico
bilidad de ayuda ante la posibilidad de tener puede ser:
un ataque de pánico, ya sea inesperado o
anticipado. • Leve: un solo episodio aislado.
• Moderado: cuando no hay comorbilidad
asociada o disfunción importante en las
DIAGNÓSTICO áreas sociales, laborales o personales.
• Severo: cuando hay comorbilidad y disfun-
Se recomienda hacer el diagnóstico de tras- ción importante.
torno de pánico con o sin agorafobia de acuer-
do a los criterios del DSM-IV.

1321
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Paso 2: si la respuesta es insuficiente cam-


biar por antidepresivos tricíclicos. Ejemplo:
Puesto que el ataque de pánico no sólo es la imipramina 75 mg + psicoterapia por 12 se-
manifestación del trastorno de pánico sino manas.
también de varias condiciones médicas ge-
nerales y de consumo de sustancias, se re- Paso 3: si la respuesta es insuficiente, cam-
comienda explorar estas posibilidades: biar de inhibidores de la recaptación de seroti-
nina a antidepresivos tricíclicos o viceversa +
1. Trastornos tiroideos. alprazolam u otra benzodiacepina por 12 se-
2. Intoxicación por sustancias estimulantes. manas.
3. Abstinencia de sustancias depresoras.
4. Trastornos cardiacos. Paso 4: si la respuesta es insuficiente agregar:
5. Epilepsia.
6. Trastornos vestibulares. • Inhibidores de la monoamino oxidasa.
7. Feocromocitoma. • Inhibidores de la recaptación de serotonina
y noradrenalina.
• Combinación de inhibidores de la recapta-
TRATAMIENTO ción de serotinina y antidepresivos tricí-
clicos.
Las modalidades que han demostrado ser • Ácido valproico o carbamazepina.
efectivas en el tratamiento del trastorno de
pánico incluyen la psicoterapia cognitiva y di-
námica y la farmacoterapia. Dentro de esta LECTURAS RECOMENDADAS
última, han demostrado ser útiles los antide-
presivos y las benzodiacepinas 1. American Psychiatric Association. Manual de Diag-
nóstico de los Desórdenes Mentales (DSMV-IV).
Paso 1: comenzar el tratamiento con inhibi- Editorial Masson. Barcelona, 1994.
dores de la recaptación de serotonina. Ejem- 2. American Psychiatric Association. Practice
guideline for the treatment of patients with panic
plo: fluoxetina 20 mg + psicoterapia por 12
disorder Am J Psychiatry 1998; 155:1S-34S.
semanas.

1322
CAPÍTULO III: DEPRESIÓN

CAPÍTULO III

Depresión

Javier León, MD
Sección de Psiquiatría
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a depresión, o trastorno depresivo mayor


(TDM), es un cuadro clínico que se asocia
con pérdida de peso, alteraciones de la con-
han sido muy cambiantes a lo largo de la his-
toria debido a que usualmente contenían opi-
niones etiológicas dentro de las mismas. Esta
ducta social e ideas de muerte y suicidio, por circunstancia condujo a que, primero, la mis-
lo cual los pacientes que la padecen acuden ma definición sufriera cambios de importancia,
con frecuencia a los servicios de urgencia, y segundo, a que los límites necesarios en un
generalmente llevados por familiares o allega- diagnóstico médico fueran borrosos. Desde
dos. Es una alteración que acompaña a enfer- 1980 se logró definir la depresión como uno de
medades graves de base, y el médico general los trastornos del estado de ánimo, alejarse de
o de urgencias debe conocer sus fundamentos connotaciones etiológicas y basarse en la pre-
etiopatológicos para darle un manejo inicial y sencia o ausencia de determinados síntomas,
poder referir el paciente a cuidado especiali- lo que permite delimitar el diagnóstico.
zado.
Con las definiciones mencionadas, la preva-
lencia a lo largo de la vida del trastorno de-
EPIDEMIOLOGÍA presivo mayor (TDM) es de 10-25% para mu-
jeres y entre 5-12% para hombres. (DSMIV).
A pesar de que la depresión está claramente
definida desde los escritos hipocráticos, las de- En el curso de las enfermedades crónicas la
finiciones del hoy llamado trastorno depresivo incidencia de TDM se eleva significativamente:

TABLA1. INCIDENCIA DEL TRASTORNO DEPRESIVO SEGÚN ENFERMEDAD SUBYACENTE

Patología crónica Incidencia Número de Estudios


Cáncer 18-39,2% 8
Enfermedad coronaria 18-19% 2
Artritis reumatoidea 12,5% 1
Enfermedad de Parkinson 21-37% 4
Accidente cerebro-vascular 30-54% 6
Diabetes 31% 1

1323
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Desde 1986 en adelante la mayoría de los TDM presentan alteraciones en la prueba


estudios acerca de la incidencia de TDM en de supresión del cortisol plasmático indu-
enfermedad crónica son “corregidos” para el cido por dexametasona.
sesgo de comorbilidad y en consecuencia las
incidencias anotadas reflejan en forma pro- 4. Un‘“marcador” importante para TDM es la
bablemente muy precisa la realidad. presencia de un ambiente familiar inade-
cuado. Se ha identificado que la pérdida
de uno de los padres antes de los 10 años
FISIOPATOLOGÍA se correlaciona con una incidencia mayor
de TDM.
La etiología sigue siendo terreno de hipótesis.
Se ha encontrado también que cerca de la
El hecho de que la depresión se presenta en mitad de los primeros episodios del TDM han
determinadas familias es conocido desde hace estado precedidos en los 6 meses anteriores
120 años. El no haberse identificado el meca- por una “pérdida”: ya sea de un ser querido o
nismo genético preciso que subyace al TDM de un rol.
impide la validación completa de las alteracio-
nes en términos de la interrelación de neuro- Otros medicamentos que alteran la dinámica
transmisores y receptores. de las neurotransmisiones (la reserpina, por
ejemplo) o la función de los ionóforos de los
La presencia de alteraciones neuroquímicas receptores de la superficie celular (algunos
se sugiere por los siguientes hallazgos: moduladores del canal de calcio) también pue-
den actuar como “gatillo” disparador de un
1. Los medicamentos que favorecen la neuro- episodio depresivo.
transmisión dopaminérgica, norodrenérgica
y serotoninérgica suelen controlar la sinto-
matología de la enfermedad y su continua- CUADRO CLÍNICO
ción por un tiempo pertinente impide las
recaídas. El rol de la serotonina parece Se requiere la presencia de los siguientes
particularmente importante dado que los criterios:
fármacos que favorecen exclusivamente
esta forma de neurotransmisión (por lo me- A. Que exista durante un periodo no inferior a
nos primariamente), logran favorecer a dos semanas, ya sea un estado de ánimo
cerca de 66% del total de los pacientes. inusualmente bajo o la pérdida del interés
por todas o casi todas las actividades de la
2. El hallazgo de que la incidencia de TDM vida cotidiana. Además cuatro o más de los
sea el doble en el género femenino y que siguientes síntomas:
dicha diferencia no exista en pacientes pre- 1. Pérdida importante de peso (más de 5%
púberes parece indicar cierta influencia de del peso total en el curso del último mes)
las hormonas femeninas (particularmente motivado por disminución drástica del
los estrógenos) en la etiología del trastorno. apetito.
2. Alteración del sueño, dificultad para con-
3. Algunos fármacos, como los esteroides ciliarlo, pero más frecuentemente dificul-
córticosuprarrenales, pueden inducir depre- tad para mantenerlo con la aparición de
sión. Además, 75% de los pacientes con despertar muy frecuente al amanecer.

1324
CAPÍTULO III: DEPRESIÓN

3. Agitación o enlentecimiento psicomotor. AYUDAS DIAGNÓSTICAS


4. Fatiga o pérdida de energía.
5. Sentimientos de inutilidad o culpa exa- El diagnóstico del TDM es fundamentalmente
gerados. clínico. Existen sin embargo dos tipos de ayu-
6. Disminución de la capacidad para pen- da diagnóstica:
sar o concentrarse.
7. Pensamientos recurrentes alrededor de 1. Escalas auxiliares para evaluar la grave-
la muerte o ideas de suicidio. dad inicial y la evolución del tratamiento.
B. Que los síntomas no formen parte de un 2. Exámenes de laboratorio para confirmar el
“episodio mixto”, propio del trastorno bipolar diagnóstico.
(psicosis maniaco-depresiva).
C. Que los síntomas provoquen un malestar Ninguna de estas ayudas es indispensable.
clínicamente significativo o un deterioro en
las relaciones familiares o sociales o un me- La más conocida de las escalas es la Escala
noscabo evidente en el rendimiento labo- de la Depresión de Hamilton. No es diagnós-
ral o académico. tica; consta de 17 items que se califican numé-
D. Que los síntomas no se expliquen por la ricamente. Valora inicialmente la gravedad del
acción de un medicamento (ej. interferón) cuadro y es útil como criterio objetivo para
o a la presencia de una enfermedad médi- evaluar el progreso del tratamiento.
ca (por ej. hipotiroidismo).
Si bien existen varias pruebas paraclínicas las
En su forma más común, la historia natural de dos más útiles son:
un episodio depresivo se inicia por un ánimo
progresivamente más bajo, asociado con pér- • Prueba de supresión de la dexametasona
dida de la motivación e incapacidad de obtener (versión abreviada). Consiste en la deter-
agrado de las actividades que a lo largo de la minación de los niveles de cortisol basal
vida lo habían causado. seguida de la administración de 2 mg de
dexametasona alrededor de las 12 am. Al
Es de destacar que la angustia puede presen- día siguiente se cuantifican nuevamente los
tarse en forma progresiva y que no es infre- niveles de cortisol plasmático a las 7 am y
cuente que se manifieste en forma intensa y las 4 pm. En condiciones fisiológicas la pre-
paroxística, de manera muy similar a un ata- sencia de la dexametasona en el organis-
que de pánico. La angustia muy frecuente- mo induce una reducción significativa en
mente es intolerable y es la que induce al pa- los niveles de cortisol. En caso de no ha-
ciente a consultar. cerlo, la prueba se considera positiva (tan-
to el TDM como algunas condiciones de la
Únicamente 10-15% de los episodios depre- corteza superarenal producen este efecto).
sivos son únicos. La inmensa mayoría restante • La tomografía cerebral por emisión de fo-
muestra una tendencia a recurrir. Las caracte- tón simple (conocida por su sigla en inglés:
rísticas de las recurrencias son progresiva- SPECT). Este examen de medicina nuclear
mente más fuertes y el espacio entre ellas se consiste en la evaluación cuantitativa del
acorta en la medida en que se presentan. flujo sanguíneo cerebral. No se encuentra
Únicamente el tratamiento apropiado y por el disponible en Colombia.
tiempo pertinente impide la presencia de múl-
tiples recurrencias.

1325
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ATENCIÓN PRE-HOSPITALARIA e. Noradrenérgico y serotoninérgico específico


Mirtazapina
La inmensa mayoría de los TDM son tratados f. Inhibidores M.A.O.
en forma ambulatoria. Sólamente existen tres g. Inhibidores selectivos de los antagonistas
circunstancias en las cuales se considera la de serotonina
hospitalización: Nefazodona

1. Alto peligro de suicidio. Todos los medicamentos antidepresivos com-


2. Niveles de angustia imposibles de ser ma- parten las siguientes características:
nejados con sedantes en dosis propias de
tratamiento ambulatorio. • Suelen ser eficaces en el control de los sín-
3. Cuando el paciente habita solo o no tiene tomas del TDM en una proporción entre 55-
ayuda y le es imposible lograr un mínimo 65%. No existen diferencias significativas
de autocuidado que le permita seguir las en la eficacia de un medicamento sobre
instrucciones del tratamiento. otro, pero sí existen diferencias individua-
les en los sujetos.
• Todos los antidepresivos presentan una
TRATAMIENTO INICIAL latencia de entre 3-4 semanas entre el inicio
de la administración y el inicio de la acción.
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
Los grupos de antidepresivos más recomen-
Los antidepresivos se reúnen dentro de ocho dados para el tratamiento del TDM en atención
grupos: primaria son el de los tricíclicos y heterocícli-
cos y el de los inhibidores de recaptura de se-
a. Antidepresivos tricíclicos y heterocíclicos: rotonina.
Amitriptilina
Maprotilina
Imipramina TRICÍCLICOS
Trazodona
Clomipramina Todos ellos en mayor o menor grado exhiben
Butriptilina actividad antimuscarínica con todo su cortejo
b. Inhibidores de la recaptura de dopamina y de síntomas; pueden inducir arritmias y para-
noradrenalina: dójicamente evitar algunas otras (acción far-
Bupropion macológica antiarrítmica tipo quinidina). Tam-
c. Inhibidores de la recaptura de serotonina y bién en proporciones variables son alfa-adre-
noradrenalina: nolíticos y anti-histamínicos y por lo tanto au-
Venlafaxina. mentan el apetito. Pueden reducir el umbral
d. Inhibidores selectivos de la recaptura de convulsivo e inducir temblor, sensación de
serotonina. calor y sudoración excesiva.
Fluoxetina
Fluvoxamina El perfil de efectos secundarios de la trazodo-
Sertralina na se diferencia de los demás: carece de ca-
Paroxetina pacidad antimuscarínica y de efectos quini-
Citalopram dínicos sobre el ritmo cardiaco; sin embargo
es bastante sedante.

1326
CAPÍTULO III: DEPRESIÓN

INHIBIDORES DE RECAPTURA dicamento sea eficaz sino que sea tolerable y


DE SEROTONINA seguro a todo lo largo de su administración.

Suelen usarse en una sola dosis al día y su Una vez se ha controlado el episodio el trata-
presentación usual corresponde a la dosis miento de mantenimiento debe continuarse
completa para “una tableta al día” en un adul- por un periodo de 6-12 meses en un paciente
to. En ancianos a veces es necesario utilizar en primer episodio. Existe evidencia en el sen-
dosis más bajas. Carecen de farmacología li- tido en que es aconsejable no reducir la dosis
neal y es controvertida la necesidad de au- durante éste período pero que en el proceso
mentar la dosis en espera de mejorar o acele- de retirado es recomendable reducir un 25%
rar una respuesta clínica. por semana hasta suspender definitivamente.

Todos ellos, pero especialmente la fluoxetina,


citalopram y sertralina, pueden inducir reac- EDUCACIÓN
ciones de hiperansiedad en las primeras fa-
ses (dos primeras semanas) del tratamiento. El éxito de un tratamiento de 56-58 semanas
depende en forma significativa del cumpli-
Todos ellos pueden presentar síntomas secun- miento del paciente con las instrucciones
darios gastrointestinales y son muy seguros medicamentosas. Este cumplimiento está es-
desde el punto de vista cardiológico. trechamente vinculado con el grado de com-
prensión e información que posea el paciente
La fluoxetina, la paroxetina, y en grado bastante sobre su condición. La capacidad del médico
inferior la fluvoxamina, pueden alterar el siste- para educar a su paciente de acuerdo a las
ma de oxidación del cítocromo P-450 en el hí- condiciones culturales es uno de los pilares
gado, particularmente la familia 2D6 y ocasio- fundamentales de la relación médico-pacien-
nar interacciones medicamentosas complejas. te en el tratamiento de TDM.

El tratamiento farmacológico se divide en 3


fases: PSICOTERAPIA
1. Aguda, hasta alcanzar una remisión. El tratamiento combinado de psicoterapia y
2. Mantenimiento, para prevenir una recaída antidepresivos ha sido estudiado en compa-
dentro del episodio en tratamiento. ración con cualquiera de los dos componentes
3. Profilaxis, para prevenir la recurrencia del solos. Su eficacia es muy superior y por lo tan-
TDM después de por lo menos seis meses to es el “patrón oro” del tratamiento del TDM.
de una remisión completa del episodio tra- Por fluido y exitoso que resulte el proceso de
tado. la psicoterapia no reduce en nada la necesi-
dad temporal del tratamiento farmacológico.
La terapia medicamentosa de mantenimiento
es obligatoria una vez alcanzada una remisión
de características clínicas satisfactorias. El TRATAMIENTO
tratamiento profiláctico se reserva a aquellos INTERDISCIPLINARIO
pacientes que han padecido uno o más episo-
dios serios. Por lo tanto, la estrategia de tra- De lo anotado anteriormente se deduce la
tamiento no sólo debe considerar que el me- extraordinaria utilidad de un equipo conforma-

1327
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

do por el médico, enfermera, psicólogo y tra- PRONÓSTICO


bajador social para que este largo proceso se
cumpla y beneficie al paciente con un trata- La naturaleza del pronóstico está constituida
miento completo tanto en el tiempo como en por lo resultante de la interacción de los fac-
los componentes. tores inherentes al trastorno y la calidad del
tratamiento.

CRITERIOS DE REFERENCIA INHERENTES AL TRASTORNO


• Ausencia de tratamiento.
El TDM suele ser complejo y su tratamiento • Múltiples antecedentes familiares.
difícil. Un número considerable de pacientes • Ausencia de factor desencadenante.
deberán ser referidos a tratamiento con espe- • Inicio temprano (<20 años).
cialista. Las siguientes condiciones resumen • Inicio tardío (>60 años).
los criterios de referencia.
CALIDAD DEL TRATAMIENTO
Suicidio: el riesgo suicida del paciente debe • Suspensión temprana del tratamiento.
valorarse a lo largo de todo el tratamiento; • Dosis sub-terapéuticas.
cuando se presente debe manejarse en forma • Respuesta parcial no corregida.
inicial para reducir la impulsividad y referirse
tan pronto como sea posible al especialista. La presencia de uno o varios de estos factores
empeora el pronóstico: manifestaciones pro-
Cuando la angustia es preponderante y difícil gresivamente más severas, recaídas y recidi-
de regular, frecuentemente las dosis para con- vas y reducción de los períodos asintomáticos.
trolarlo exceden las prudentes para prescrip-
ción ambulatoria. Estos montos de angustia Además, la presencia de una enfermedad cró-
suelen producir severos efectos sobre el fun- nica comórbida reduce las posibilidades de re-
cionamiento global del paciente y también un misiones completas y peor aún, dicha enfer-
impacto muy serio en la familia y el entorno. medad hace necesaria la administración de
Ante su presencia es recomendable referir a medicamentos que incrementan el TDM (corti-
especialista. coides, interferon).

En caso de concurrir un TDM con una crisis


psicosocial, es necesario adelantar una serie LECTURAS RECOMENDADAS
de intervenciones que trascienden el ambien-
te del cuidado primario. 1. American Psychiatric Association. Diagnostic and
Statistical Manual of Mental Disorders. Fourth
Cuando un tratamiento agudo únicamente re- Edition. Text Revision. American Psychiatric
Association. Washington DC, 2000.
sulte en una respuesta parcial y dicho tipo de
2. Glick RL, Ghaemi SN. The emergency treatment
respuesta insatisfactoria se prolongue por más of depression complicated by psychosis or
de 12 semanas, es probable que se requie- agitation. J Clin Psychiatry 2000; 61:43-48.
ran estrategias de potenciación, re-evaluacio- 3. Janicak, P, Davis,J, Preskorn J. et al. Principles
nes diagnósticas y formas duales de medica- and Practice of Psychopharmocotherapy. 2 nd
ción que forman parte del terreno de lo espe- edition. Williams and Wilkins. Baltimore, 1997.
cializado. 4. Llewellyn-Jones RH, Baikie KA, et al. Multifaceted
shared care intervention for late life depression in

1328
CAPÍTULO III: DEPRESIÓN

residential care: randomised controlled trial. BMJ 8. Rapaport MH. Prevalence, recognition, and
1999; 319:676-682. treatment of comorbid depression and anxiety. J
5. Mynors-Wallis LM, Gath DH, et al. Randomised Clin Psychiatry 2001; 62 Suppl 24:6-10.
controlled trial of problem solving treatment, 9. Scott J, Teasdale JD, Paykel ES, et al. Effects of
antidepressant medication, and combined cognitive therapy on psychological symptoms and
treatment for major depression in primary care. social functioning in residual depression. Br J
BMJ 2000; 320:26-30. Psychiatry 2000; 177:440-446.
6. Novoa J. Antidepresivos. En: Fundamentos de 10. Simon GE, Katon WJ, VonKorff M, et al. Cost-
Psiquiatria Clinica: Niños, Adolescente y Adultos. effectiveness of a collaborative care program for
Gómez-Restrepo C, Editor. Centro Editorial primary care patients with persistent depression.
Javeriano. Bogotá, 2002. Am J Psychiatry 2001; 158:1638-1644.
7. Parker G, Gladstone G, Chee KT. Depression in 11. Simon GE, VonKorff M, Rutter C, Wagner E.
the planet’s largest ethnic group: the Chinese. Am Randomised trial of monitoring, feedback, and
J Psychiatry 2001; 158:857-864. management of care by telephone to improve
treatment of depression in primary care. BMJ 2000;
320:550-4.

1329
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IV

Brotes psicóticos

Jorge Ballesteros, MD
Sección de Psiquiatría
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l brote psicótico se define como una alte-


ración grave en el juicio de la realidad que
se asocia con la presencia de delirios, aluci-
je desordenado, conducta catatónica y/o des-
organizada y síntomas negativos tales como
el aplanamiento afectivo, alogia o abulia. Al
naciones y cambios en la conducta, que van menos dos de estos síntomas pueden haber
desde la agitación psicomotora hasta el estu- estado presentes durante 6 meses (salvo que
por catatónico. el paciente se haya tratado previamente) y se
asocian a una disfunción laboral y social.
El estudio de un paciente con brote psicótico
se inicia con la historia clínica completa, la cual
debe encaminarse a efectuar un diagnóstico TRASTORNO PSICÓTICO BREVE
de la patología subyacente, ya que el brote
psicótico por sí solo no es una entidad nosoló- Este cuadro se caracteriza por la presencia
gica y constituye una sintomatología común a de uno de los dos siguientes síntomas:
varias entidades siquiátricas. Para tales efec-
tos es necesario siempre tener en cuenta los • Ideación delirante.
datos aportados por los familiares, porque fre- • Alucinaciones.
cuentemente estos pacientes, por su mismo • Lenguaje desorganizado.
cuadro clínico, no están en capacidad de su- • Conducta catatónica o desorganizada.
ministrar una información confiable.
Los síntomas pueden tener una duración de
un día hasta un mes. Corresponde a la ante-
ETIOLOGÍA riormente denominada psicosis reactiva, en
la cual un factor de estrés es el desencade-
Efectuar un estudio de las diferentes patolo- nante, habiéndose descartado un factor orgá-
gías psiquiátricas sería extenso y sobrepasa nico o el uso de sustancias químicas. Si la
los objetivos de esta guía, por lo cual sólo se persistencia del cuadro es mayor a un mes y
refiere a aquellas patologías que con mayor menor de seis, se efectúa un diagnostico de
frecuencia se asocian al brote psicótico. trastorno esquizofreniforme. Este cuadro,
a diferencia de la esquizofrenia, además de
su tiempo de evolución no presenta síntomas
ESQUIZOFRENIA premórbidos (disfunción o deterioro laboral y
social) y no cursa con aplanamiento del afec-
La esquizofrenia se caracteriza por la presen- to, lo cual hace que tenga un mejor pronósti-
cia de ideas delirantes, alucinaciones, lengua- co que la esquizofrenia.

1330
CAPÍTULO IV: BROTES PSICÓTICOS

El trastorno psicótico debido a enfermedad MANEJO


médica y el trastorno pscótico inducido por
sustancias químicas son brotes psicóticos La historia clínica debe ir dirigida a descartar la
donde, respectivamente, una enfermedad mé- presencia de alguna enfermedad médica, así
dica o el consumo de una sustancia y/o medi- como la presencia de alguna sustancia o me-
camento originan el cuadro psicótico. dicamento que pudiera estar generando el cua-
dro. Por eso el examen físico y neurológico com-
pleto son de gran ayuda diagnóstica, y se deben
TRASTORNOS DEL ESTADO complementar con exámenes paraclinicos se-
DE ÁNIMO gún el caso. Un paciente en estado de agita-
ción psicomotora es una urgencia psiquiátrica,ya
El trastorno depresivo mayor puede cursar con que constituye un peligro, tanto para sí mismo
síntomas psicóticos, los cuales pueden ser como para los demás. El centro hospitalario de-
congruentes con el estado de ánimo. Un ejem- be contar con los medicamentos necesarios en
plo de éstos son las alucinaciones o ideas deli- el sitio de recepción. Cinco minutos en estado
rantes, cuyo contenido se relaciona con sen- de agitación psicomotora severa pueden ser ca-
timientos de inutilidad, culpa, enfermedad o tastróficos. Cuando el cuadro es severo es difícil
nihilismo. Su contraparte, el episodio maniaco, obtener una historia previa y mucho menos un
igualmente puede cursar con síntomas psicó- diagnóstico, pero el tratamiento no da espera.
ticos congruentes con el estado de ánimo; la
ideación delirante y el contenido alucinatorio Se debe proceder a la contención, la cual,
se relacionan con el aumento de la autoestima, idealmente, se efectúa por 5 personas que se
poder, sabiduría, etc. harán cargo de las 4 extremidades (sujetan-
do la parte proximal) y de la cabeza. Si no se
puede efectuar la contención, se recomienda
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL que el médico efectúe la entrevista o el abor-
daje del paciente en un sitio donde tenga ac-
Es importante anotar la dificultad que se pre- ceso a una salida en caso de emergencia. El
senta con cierta frecuencia para evaluar la pre- médico debe informar al paciente en forma
sencia o no de alucinaciones. Las alucinacio- clara y concisa el procedimiento que se le
nes son alteraciones sensoperceptivas no va a efectuar. El lograr transmitir esta seguri-
asociadas a un estímulo externo. Si un pacien- dad y decisión al paciente por parte del médi-
te refiere que el techo o las paredes le pare- co evita, en ocasiones, que el cuadro de agi-
cen cambiar de forma, tamaño, o distancia, tación aumente. Por el contrario, si el pacien-
esto obedece a una ilusión, y puede corregir te percibe que en el médico puede haber duda,
este error de percepción al ser interrogado. temor o susto, esto será aprovechado con el
Igualmente, pacientes que están recibiendo fin de intimidar más al grupo de soporte.
hipnóticos y/o sedantes pueden narrar aluci-
naciones de carácter muy vívido al despertar Esta situación deja entrever un aspecto y es
o al dormirse (alucinaciones hipnopómpicas que, si bien, la psicosis implica una ruptura
e hipnagógicas respectivamente) las cuales con la realidad, ésta no se produce totalmen-
no hacen parte de un trastorno psicótico. La te. Generalmente partes del “Yo” están habili-
acatisia se mencionará posteriormente. tadas para establecer algún tipo de contacto
con la realidad, y el médico, si tiene entrena-
miento psicoterapéutico, puede aprovecharlo.

1331
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FARMACOTERAPIA aumento de la agitación psicomotora, llevan-


do en ocasiones a formular más neuroléptico
Dado lo apremiante de la situación se requie- cuando lo que se requiere es la disminución
re que el manejo sea por vía parenteral usando de la dosis -en lo posible-, adicionando el uso
neurolépticos incisivos. En nuestro medio con- de biperideno–akineton 5 mg IM o prometa-
tamos con el haloperidol en ampollas de 5 zina-fenergán.
mg. Si el cuadro es severo se sugiere iniciar
con una dosis de 5–10 mg IV cada media hora El síndrome neuroléptico maligno: este cua-
hasta obtener la respuesta deseada. General- dro amenaza la vida del paciente y se carac-
mente no se requieren dosis mayores a 30 teriza por rigidez muscular generalizada, fie-
mg, pero en caso de necesidad se puede au- bre, diaforesis, taquicardia, aumento de la ten-
mentar la dosis (se han reportado dosis hasta sión arterial, mutismo, embotamiento y agita-
de 100 mg) ya que es un fármaco que ofrece ción. Generalmente se asocia con el uso de
un amplio margen de seguridad, haciéndolo elevadas dosis de neurolépticos o con el uso
de elección para el manejo de pacientes com- de 2 ó más de ellos, siendo más propensos
prometidos médicamente. El haloperidol tiene los pacientes de edad avanzada o los compro-
un efecto sedativo muy bajo, por lo cual, si se metidos orgánicamente. Los exámenes de
requiere sedación, se sugiere el uso de diaze- laboratorio muestran leucocitosis y aumento
pam 5–10 mg IV lento (1-2 minutos). Ofrece de la CPK (>1000 IU). El manejo requiere
mayor seguridad la vía IV, la absorción IM hospitalización, suspensión de los neurolépti-
puede ser errática. cos y medidas generales, como reposición
hidroelectrolítica, medios físicos, dantrolene
Cuando el brote psicótico hace parte de un 2-3 mg/kg IV, bromocriptina 2,5-10 mg cada 6
trastorno del estado de ánimo se debe iniciar horas y administración de benzodiazepinas.
el manejo correspondiente. Además de las
medidas anteriormente expuestas, si el cuadro Todo paciente con diagnóstico de brote psicóti-
corresponde a un trastorno depresivo mayor co, así éste haya sido resuelto, deberá tener
se debe iniciar manejo con antidepresivos. Si valoración psiquiátrica, pues es necesario
el cuadro es un trastorno bipolar se debe iniciar determinar los posibles factores psicodinámi-
manejo con estabilizadores del estado de áni- cos subyacentes.
mo como litio, carbamazepina o ácido val-
proico. Los cuadros de manía generalmente
responden a dosis bajas de neurolépticos y al LECTURAS RECOMENDADAS
uso de benzodiacepinas como el lorazepam
o el clonazepam. 1. Adnet P, Lestavel P, Krivosic-Horver R. Neuroleptic
malignant syndrome. Br J Anaesth 2000; 85:129-
Es necesario mencionar dos efectos secun- 135.
2. American Psychiatric Association. Practice
darios de los neurolépticos, a saber:
guideline for the treatment of patients with
schizophrenia. Am J Psychiatry 1997; 154(4
Acatisia: cuando el médico no está habitua- Suppl):1-63.
do al uso de neurolépticos, es frecuente que 3. Brook S, Lucey JV, Gunn KP. Intramuscular
al observar en el paciente una inquietud mo- ziprasidone compared with intramuscular
tora (el paciente se levanta y se sienta conti- haloperidol in the treatment of acute psychosis.
nuamente, con incapacidad para el reposo y Ziprasidone I.M. Study Group. J Clin Psychiatry
desasosiego), confunda este cuadro con un 2000; 61:933-941.

1332
CAPÍTULO IV: BROTES PSICÓTICOS

4. Byford S, Barber JA, Fiander M, et al. Factors that and schizoaffective disorder. Am J Psychiatry
influence the cost of caring for patients with severe 2002; 159:255-262.
psychotic illness: report from the UK 700 trial. Br J 7. Walsh E, Gilvarry C, Samele C, et al. Reducing
Psychiatry 2001; 178:441-447. violence in severe mental illness: randomised
5. Drury V, Birchwood M, Cochrane R. Cognitive controlled trial of intensive care management
therapy and recovery from acute psychosis: a compared with standard care. BMJ 2001;
controlled trial. 3. Five-year follow-up. Br J 323:1093-1096.
Psychiatry 2000; 177:8-14. 8. Walsh E, Harvey K, White I, et al. Suicidal behaviour
6. Volavka J, Czobor P, Sheitman B, et al. Clozapine, in psychosis: prevalence and predictors from a rando-
olanzapine, risperidone, and haloperidol in the mized controlled trial of case management: report from
treatment of patients with chronic schizophrenia the UK700 trial. Br J Psychiatry 2001; 178:255-260.

1333
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO V

Intento de suicidio

Javier León Silva, MD


Sección de Psiquiatría
Fundación Santa Fe de Bogotá

L a Organización Mundial de la Salud (OMS)


define el intento de suicidio como “un acto
no habitual, con resultado no letal, delibera-
Se estima que existe una proporción de 8:1
entre los intentos y las muertes por suicidio,
aunque existen amplias diferencias según
damente iniciado y realizado por el sujeto, para edad y género. La incidencia es mucho más
causarse auto-lesión o determinarla sin la in- grande en mayores de 60 años.
tervención de otros, o también ocasionarla por
ingesta de medicamentos en dosis superior a De aquellos que intentaron el suicidio y falla-
la reconocida como terapéutica”. ron, una tercera parte tuvieron otro intento en
el curso del año siguiente.
Criterios operativos de un suicidio:
a. Un acto con resultado letal; En Colombia, el suicidio representa el 5,3%
b. Deliberadamente iniciado y realizado por de las muertes violentas de acuerdo con los
el sujeto. informes del Instituto de Medicina Legal. Se-
c. El sujeto sabe o espera el resultado letal, senta de las 1.492 víctimas de suicidio en 1994
y fueron estudiadas por medio de extensas en-
d. Busca la muerte como instrumento para trevistas a familiares y relacionados (“autop-
obtener cambios deseables en la actividad sia psicológica”) y se encontró presencia muy
consciente y/o en el medio social”. significativa de trastornos psiquiátricos.

EPIDEMIOLOGÍA CUADRO CLÍNICO,


AYUDAS DIAGNÓSTICAS
En el mayor estudio realizado hasta la fecha Y ATENCIÓN PREHOSPITALARIA
en los Estados Unidos (llamado ECA) sobre
prevalencia de enfermedades psiquiátricas en El mayor número de casos suele presentarse,
la comunidad general en 18.000 sujetos ma- como es obvio, en el servicio de urgencias. No
yores de 18 años, 2,9% reportaron que habían existe una coincidencia significativa entre la
intentado suicidarse en algún momento de sus gravedad médica del intento y el riesgo vital a
vidas. Todos ellos presentaban alguna forma que se expone quien lo ejecuta. Por ejemplo,
de patología psiquiátrica. Otros factores de un acto autolesivo interpretado como breve pro-
riesgo identificados fueron el género femeni- ducto de impulsividad emotiva, con pocas con-
no, el ser separados, divorciados o viudos y secuencias inmediatas, puede tener conse-
un nivel socioeconómico bajo. cuencias médicas de mucha trascendencia. De
la misma manera, un intento de alta intencio-

1334
CAPÍTULO V: INTENTO DE SUICIDIO

nalidad premeditada, puede presentarse como La valoración inicial debe centrarse en la grave-
ingesta de una sustancia de baja toxicidad, dad del intento. Es necesario tener en cuenta:
debida a la mala información del paciente.
1. La violencia del mismo. Aquellos métodos
La apariencia, el porte y la actitud del paciente especialmente violentos pueden ser indi-
pueden ser igualmente engañosos. Algunos cativos de patología psiquiátrica grave (es-
pacientes con intención suicida altamente es- quizofrenia, por ejemplo) o de circunstan-
tructurada pueden mostrarse al examen médico cias que comprometan las funciones corti-
como calmados, reflexivos y demostrando un cales del paciente (cuadros neurológicos).
“gran control”, ocultando elementos fundamen-
tales para la anamnesis y con una actitud y 2. Condiciones de planeación: ¿es el intento
apariencia aparentemente tan adecuadas co- el resultado de un plan bien reflexionado
mo para evitar la intervención médica de emer- por el paciente?
gencia. Esta intervención puede ser salvadora,
no solamente por el control de heridas o de 3. ¿Cuál era la situación del paciente antes
toxicidad, sino por la adopción de medidas que del intento? Esto incluye una apreciación
puedan preservar la salud y la vida del paciente. breve de las circunstancias emocionales y
cognoscitivas predominantes en dicho pe-
Ante todo intento de suicidio, el comportamien- ríodo. ¿Es acaso síntoma de un trastorno
to del médico debe seguir los siguientes linea- psiquiátrico previamente diagnosticado?
mientos:
Desde la década de los 1950 se inició el estu-
1. Manifestar una empatía que exprese sere- dio de algunas variables presentes en los pa-
nidad y que tienda permanentemente a cientes que han consumado el suicidio, resu-
mantener un clima de respeto explícito, lo midas en la Tabla No. 1.
que implica no emitir juicios apresurados
con respecto a la conducta del paciente.
2. Tener siempre presente que los pacientes CONTROL DE IMPULSOS
pueden presentar reacciones muy intensas
y de inicio rápido frente al médico, que pue- El término “control de impulsos” se refiere a
den ir desde franco rechazo hasta un com- tener un conocimiento clínicamente operativo
promiso emocional marcado. de la capacidad que tiene el paciente para
3. Asegurar la participación activa de la fami- reprimir deseos y necesidades de naturaleza
lia en la atención y el tratamiento. Se debe sexual, agresiva y/o narcisista y la forma como
informar a la familia, tanto sobre los hallaz- estos se expresan en acción. No puede ba-
gos en el paciente, como sobre cada paso sarse en una primera impresión; requiere in-
que se va a seguir y los peligros implícitos formación que se obtiene durante la entrevis-
que haya podido tener el intento. Muchas ta con el paciente y sus familiares o por me-
familias perciben alivio al iniciarse la aten- dio de preguntas dirigidas, precisando y con-
ción médica. No es raro que éste alivio se frontando hasta obtener la información que
siga de una despreocupación que lleva a sea útil. A continuación se describen cuatro
que se omitan otras medidas, como inter- niveles de acuerdo al estudio sueco llamado
consultas a psiquiatría o valoraciones neu- KPP. Mientras mayores sean los anteceden-
rológicas o psicológicas, de las que puede tes de pobre control, mayor es el peligro de
depender en el futuro la vida del paciente. repetición inmediata del intento.

1335
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA No. 1

VARIABLE
Edad Especial atención a los pacientes mayores de 60 años, pues presentan mayor letalidad. En
adolescentes averiguar exhaustivamente el antecedente de intentos de suicidio en el grupo de
pares, pues a esta edad existe cierto “contagio” imitativo. Se han descrito formas epidémicas.
Género La proporción entre intentos y consumación del suicidio en el sexo masculino es más alta.
Estado civil Se ha observado mayor frecuencia de consumación en pacientes solteros o separados.
Familiares con quien vive Permite conocer la disponibilidad de compañía que tiene el paciente, la ausencia de seres
especialmente significativos y sobre quién va a cuidar al paciente en caso de que se decida un
tratamiento ambulatorio o una hospitalización breve.
Alcohol y substancias Su presencia incrementa muy significativamente el riesgo.
Pérdidas significativas Los procesos de adaptación a las pérdidas (duelos) suelen acompañarse de estados de ánimo
en los últimos seis meses bajo; sentimientos de futilidad y desesperanza también pueden empeorar algunos cuadros
psiquiátricos
Antecedentes de suicidio La repetición de la conducta autolesiva, independientemente del tiempo entre los dos episo-
dios empeora la posibilidad letal. La presencia de antecedentes familiares de suicidio es un
indicativo de alerta y ante su presencia se debe actuar muy conservadoramente en lo referen-
te al cuidado posterior a la solución de la urgencia médica que se dé al paciente.
Diagnóstico Los trastornos del estado de ánimo (Trastorno Depresivo Mayor, especialmente si forma parte
de un trastorno bipolar –psicosis maniaco-depresiva–) causan la mayor parte de los suicidios.
La esquizofrenia ocupa el segundo lugar. Algunas enfermedades crónicas, especialmente de
naturaleza neurológica (esclerosis múltiple, enfermedades de Parkinson y Huntington) o algu-
nos tumores malignos se relacionan con un incremento en la letalidad autoinfringida.

1. Buen control de impulsos: 3. Control exagerado de sentimientos e im-


Puede expresar y manejar afectos urgen- pulsos:
tes, deseos y necesidades de manera Dificultad en establecer limites. Dificultades
adaptativa. Puede lograr un balance basa- generalizadas para afirmar deseos y ne-
do en la realidad entre deseos y necesida- cesidades haciendo demandas o vociferan-
des por una parte y la posibilidades y limi- do criticas, lo cual puede llevar a inhibición
taciones del ambiente por otra. en situaciones de necesidad. Dificultad “in-
Puede experimentar conscientemente sen- necesaria” al hacer una solicitud. Sus ne-
saciones fuertes, deseos y necesidades, cesidades pueden ser desplazadas hacia
sin permitir que se expresen en la acción. personas o situaciones “equivocadas”, bajo
circunstancias especiales. Los deseos y
2. Control medio de impulsos: necesidades pueden a veces ser expresa-
Los efectos urgentes, deseos y necesida- das bajo influencia de alcohol o drogas o
des son manejados a través de un balan- en estados regresivos causados por crisis.
ce no adaptativo entre deseos y necesida-
des, por una parte, y las posibilidades y li- 4. Pobre control de impulsos:
mitaciones de la realidad por la otra. Manifiesta dificultad en posponer la satis-
facción de necesidades y deseos urgentes
y en controlar los efectos a que ellos pue-

1336
CAPÍTULO V: INTENTO DE SUICIDIO

den dar lugar: comportamiento impulsivo, o la mayoría de la dosis a la hora de dor-


generalizado de palabra y obra. mir.
Los deseos y necesidades son de carácter 2. En el resto de los pacientes deben utilizar-
compulsivo y tienen que ser efectuados in- se benzodiacepinas de alta potencia:
mediatamente con poca o ninguna consi- alprazolam o lorazepam. Las variaciones
deración hacia las consecuencias. individuales en la respuesta son muy am-
plias y la dosificación debe tener en cuen-
ta la respuesta inicial, valorada a las dos
TRATAMIENTO INICIAL horas de administrada por vez primera.
Y CRITERIOS DE REFERENCIA
Una vez controlada la ansiedad, se plantea el
El punto inicial es asegurar la supervivencia problema de la continuidad del tratamiento,
del paciente. El segundo es la prevención de ya que éste debe seguirse en forma ambulato-
nuevos intentos, inmediatos o a largo plazo. ria. Es prudente iniciarlo por medio de una
hospitalización general breve (24-48 horas).
Como la etiología más frecuente del intento
de suicidio son los estados depresivos en ge- 1. En el caso de excelente respuesta a la se-
neral, sus síntomas suelen ser los más evi- dación, con un ambiente familiar estructu-
dentes. Desde el punto de vista farmacológico rado y responsable, una patología psiquiá-
el control de los mismos suele aparecer entre trica leve y una historia de buen control de
dos y tres semanas después de iniciado el impulsos, el paciente podrá continuar su
antidepresivo. Por lo tanto, la inmediata pres- tratamiento ambulatoriamente.
cripción de antidepresivos no tiene efecto 2. Si algunos de esos puntos no se cumplen,
práctico para el momento en el cual se deben es prudente optar por una hospitalización
tomar determinaciones. breve que garantice control adecuado tan-
to del sueño como del control de la ansie-
La ansiedad y el insomnio tienen efectos alta- dad, y que permita un tiempo para que al-
mente negativos sobre el control de impulsos gunas circunstancias ambientales puedan
y sobre la determinación suicida en particular. ser reflexionadas y en consecuencia con-
La intervención farmacológica más importante troladas por el paciente.
en urgencias es el control de estos dos sínto- 3. Si la patología psiquiátrica es evidente, o si
mas. La elección del tipo de medicamento el intento de suicidio ocurrió bajo efecto de
depende de las características de impulsividad tóxicos y existe historia de uso frecuente,
del paciente. abuso o adicción, el tratamiento debe hacer-
se en clínica u hospital especializado, pues
1. En caso de historia de pobre control de im- las posibilidades de recurrencia son altas.
pulsos, las benzodiacepinas pueden incre-
mentar dicha impulsividad. En tal sentido,
se debe elegir un antipsicótico atípico a LECTURAS RECOMENDADAS
dosis muy bajas: clozapina 6,25-25mg por
1. Borges G, Rosovsky H, Gómez C. Epidemiología
dia, risperidona 0,25-1mg por día, u olan- del suicidio en México de 1970 a 1994. Salud
zapina 1,25-5 mg por dia. Tanto la clozapina Pública Mex 1996; 38:197-206.
como la olanzapina pueden inducir som- 2. Conwell Y. Henderson R. Neuropsychiatry of sui-
nolencia, efecto secundario que debe te- cide. En: Neuropsychiatry. B Fogel (ed). Williams
nerse en cuenta para así prescribir el total & Wilkins. Baltimore, 1996.

1337
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

3. Flórez F. Conducta suicida. En: Fundamentos de 5. Jimenez I. Análisis del suicidio a través de la au-
Psiquiatría Clínica: Niños, Adolescentes y Adul- topsia psicológica. Rev. Col Psiquiatría 1998;
tos. Editado por C Gómez-Restrepo. Centro Edi- 27:197-206.
torial Javeriano. Bogota, 2002. 6. Soler PA, Gascon J. RTM-II. Recomendaciones
4. Haver B, Svanborg P, Lindberg S. Improving the terapéuticas en los trastornos mentales. Masson.
usefulness of the Karolinska Psychodinamic Profile Barcelona, 1999.
(KPP) in research: proposals from a reliability
study. Acta Psychiatr Scand 1995; 92:132-137

1338
CAPÍTULO I: ACCESOS VENOSOS DE EMERGENCIA

CAPÍTULO I

Accesos venosos de emergencia

Martha C. Nieto, Enf.


Hospital Universitario San Ignacio.

C on bastante frecuencia el manejo de los


pacientes en urgencias requiere la ins-
tauración de una vía venosa para la reanima-
Es una medida temporal y debe remplazarse
por el acceso venoso tan pronto sea posible.
La punción se realiza con aguja espinal con
ción aguda, hidratación, control del dolor, ob- mandril o aguja hipodérmica calibre 16-18 Ga
servación del paciente, transfusión sanguínea conectada a una jeringa, en la cara antero-
y recolección de muestras de sangre. Aunque interna del tercio proximal de la tibia. Este pro-
existen diversas técnicas para el logro de es- cedimiento está contraindicado en pacientes
tos objetivos, la inserción de un catéter veno- mayores de ocho años, fractura, trastornos
so periférico es de primera elección, por ser óseos y uso de medicamentos tóxicos para la
un procedimiento sencillo, rápido y con míni- médula ósea. Este procedimiento debe ser
mas complicaciones para el paciente cuando realizado por un médico.
se realiza por personal con un buen nivel de
capacitación y destreza. En esta guía se ex- Venodiseción: consiste en el abordaje de una
plica de manera amplia el uso del catéter ve- vena a través de la incisión de la piel, del teji-
noso periférico y se describe en forma breve do celular subcutáneo y la inserción directa
otras técnicas para el acceso venoso. de un catéter en la vena. Está indicada en si-
tuaciones en las cuales ha sido imposible la
Catéteres venosos centrales: es un proce- punción percutánea. Su uso está cada vez
dimiento programado, que requiere estabili- más restringido, puesto que los reportes indi-
dad del paciente, tiempo y condiciones más can una mayor incidencia de infecciones de-
exigentes en la técnica aséptica, por lo tanto, bido a la manipulación de los tejidos, requiere
su inserción en urgencias no resulta práctica. personal entrenado, equipo de disección y ma-
Sin embargo, la enfermera debe conocer su yor tiempo de intervención quirúrgica. Se rea-
manejo, puesto que cuando el paciente llega liza con mayor frecuencia en población infantil.
a urgencias con el catéter instaurado está in-
dicado su uso y no la inserción de un catéter En pacientes con trauma múltiple el sitio de
venoso periférico. Este tema puede ser con- elección es la vena safena interna, al nivel de
sultado en la guía Accesos venosos centra- tobillo, realizando la incisión 2 cm delante y
les de esta serie. encima del maléolo interno o tibial. Seguido
por la vena mediana basílica en la región ante-
Infusión intraósea: se utiliza para la admi- cubital, 2,5 cm por fuera de la epitróclea hu-
nistración de líquidos y medicamentos en ni- meral en el pliegue de la flexión del codo. En
ños menores de ocho años cuando los inten- los casos urgentes se recomienda disecar la
tos por obtener un acceso venoso no han te- vena que se identifique más fácilmente, sin
nido éxito y se está frente a una reanimación. embargo, algunos factores pueden influenciar

1341
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ésta elección, un ejemplo es la vena yugular y reacciones en el sitio de inserción. Todo de-
externa, fácilmente accesible por ser muy su- pende de la duración del tratamiento endo-
perficial, pero su resultado es poco estético. venoso, del grado de actividad del paciente,
las condiciones de la piel y del número de
Catéter venoso periférico: la utilización de inserciones ya realizadas.
los catéteres intravenosos periféricos en pa-
cientes de urgencias es de alta frecuencia. De Una revisión sistemática de la efectividad de
acuerdo con los datos del programa de segui- los cuidados en el mantenimiento de catéteres
miento de las venopunciones periféricas del de inserción periférica realizada por Garitano
Departamento de Urgencias de la Fundación y cols, mostró los siguientes resultados:
Santa Fe de Bogotá, alrededor de 13% de los
pacientes ambulatorios tienen una vía venosa • Los riesgos específicos diarios de compli-
periférica para la administración de líquidos, caciones aumentan significativamente a
electrolitos, medicamentos y transfusión san- partir de las 24 horas y permanecen cons-
guínea. Asimismo, se calcula que un 60% de tantes entre los días segundo y sexto pos-
los pacientes hospitalizados tienen un catéter terior a la inserción.
intravenoso en algún momento de la hospita- • La incidencia de flebitis no infecciosa au-
lización. menta después de 72 horas de colocación
de la vía periférica. Cuando los pacientes
Como toda técnica invasiva tiene sus riesgos permanecieron con las cánulas por más de
y complicaciones, entre ellas, flebitis y trom- 120 horas (cinco días) todos presentaron
bosis, alterando en algunos casos la evolución tromboflebitis.
del paciente y prolongando la estancia hospi- • La correcta aplicación de un apósito y el
talaria con el correspondiente incremento en reemplazo del catéter después de 48 ho-
el costo de la atención. ras de ser instaurado disminuye la inciden-
cia de infección relacionada con catéteres
El avance en los últimos veinte años ha sido venosos periféricos.
marcado, al introducir materiales que causan • La curación cada 24 horas se traduce en
menor reacción a nivel local, disminuyen la una mayor incidencia de flebitis, debido
colonización de bacterias y notoria reducción probablemente a la manipulación del caté-
en el calibre de la cánula periférica. A pesar ter durante el procedimiento.
de los avances obtenidos, no se ha logrado
establecer un protocolo de manejo de los caté-
teres venosos periféricos que ofrezca seguri- INDICACIONES
dad en la disminución de complicaciones al
colocar un catéter periférico; lo único que es • Reposición de líquidos y electrolitos.
cierto es que el estricto uso de la técnica asép- • Administración de medicamentos intrave-
tica en la realización del procedimiento dismi- nosos.
nuye las complicaciones. Otras medidas, ta- • Transfusión de sangre y sus derivados.
les como, colocación de apósitos de gasa fren- • Recolección de muestras de sangre.
te a apósitos transparentes, cambio periódico • Mantener una vía venosa permeble para
del catéter y curación 24 horas posterior a la casos de emergencia.
inserción, no aseguran la ausencia de flebitis • Realización de estudios diagnósticos.

1342
CAPÍTULO I: ACCESOS VENOSOS DE EMERGENCIA

PROCEDIMIENTO 9. Fijación de la vena, sin entrar en contacto


con la zona preparada para la punción, uti-
1. Explicar al paciente el procedimiento. lizando los dedos índice y pulgar de la
2. Ubicación del paciente de tal forma que la mano no dominante estirando la piel.
extremidad permanezca en una superficie 10.Técnica de punción: dirigir la aguja en un
firme y plana. ángulo de 10-30º con el bisel hacia el lado
3. Lavado de manos y colocación de guantes (ocasiona menos dolor) hasta penetrar la
limpios. piel, posteriormente reducir el ángulo para
4. Selección del sitio de punción: evaluar cali- evitar traspasar la pared posterior de la
bre, condición de la vena, presencia de tor- vena. Al obtener retorno de sangre a la cá-
tuosidades, equimosis, indicación del catéter. mara de la aguja, se avanza el catéter y se
5. Aplicación del torniquete: con el fin de pal- retira simultáneamente la aguja guía; se
par y ver las venas. No tensionar demasia- ocluye por un momento el flujo haciendo
do, puesto que, se obstruye el flujo sanguí- presión con el dedo pulgar sobre la vena
neo; se puede constatar al palpar el pulso. en el sitio donde se localiza la punta del
6. Si es un anciano o un niño aplicar el torni- catéter, se retira el torniquete y se desecha
quete muy suave o utilizar los dedos como inmediatamente la aguja en un recipiente
éste de lo contrario se puede dañar la vena dispuesto para este fin (Guardián®).
en el momento de la inserción de la aguja. 11.Conectar el equipo con la solución a infun-
7. Palpación de la vena: utilizar los dedos ín- dir o el adaptador PRN adapter® (tapón
dice y medio de la mano no dominante para heparinizado) y ajustar la velocidad de in-
palpar la vena, estos tienen mayor sensi- fusión a un ritmo adecuado.
bilidad que los de la mano dominante; una 12.Para la instauración de un catéter con ta-
vena sana se palpa suave, elástica, resis- pón se lava el catéter con 1 mL de solu-
tente y sin pulso. La palpación es la técni- ción salina haparinizada (100 UI/mL).
ca de mayor valor, si se puede percibir, ubi- 13.Comprobar que el líquido fluye libremente,
car y definir el trayecto de la vena la inser- cubrir con apósito y fijar el catéter.
ción del catéter será un éxito. En caso de 14.Marcar la venopunción con la fecha, hora
no palpar o visualizar la vena intentar las y calibre del catéter. Marcar los equipos de
siguientes maniobras: colocar una compre- infusión con la fecha.
sa caliente a lo largo del brazo o sitio de 15.Registrar en la historia clínica el procedimien-
inserción 10 minutos antes de la aplicación to, complicaciones y respuesta del paciente.
del torniquete, realizar masaje en dirección 16.Evaluar por lo menos una vez por turno el
al flujo sanguíneo e indicar al paciente que sitio de la venopunción y las soluciones que
abra y cierre la mano. se están infundiendo.
8. Preparación de la piel con una solución 17.Realizar curación del sitio de inserción cada
antiséptica que puede ser alcohol al 70%, 48 horas, o antes, si el apósito se hume-
povidona yodada al 10% o tintura de yodo dece o está en mal estado.
al 2%. Frotar el sitio de inserción del cen- 18.Cambiar la venopunción cada 72 horas, o
tro a la periferia por un lapso de 60 segun- antes, si se presenta dolor, frío, palidez cu-
dos y se deja actuar la solución por espa- tánea, eritema o inflamación en el sitio de
cio de dos minutos, tras lo cual se retira el punción.
exceso. No utilizar alcohol después de apli- 19.Explicar al paciente los signos y síntomas
car solución de yodo, puesto que impide la de flebitis y extravasación para que infor-
actividad antiséptica residual del yodo. me de manera oportuna su presencia.

1343
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RECOMEDACIONES • Un principio general es comenzar de la


zona distal a la proximal.
• El profesional de la salud debe poseer am- • No rasurar la zona de punción; se produ-
plio conocimiento del procedimiento y de cen microabrasiones que incrementan el
su objetivo para seleccionar el tipo de ca- riesgo de infección, si es necesario cortar
téter y la vena a utilizar. el vello.
• Utilizar el catéter más corto y de menor ca- • No palpar la zona de inserción después de
libre que se acomode al tratamiento pres- haber limpiado la piel con solución antisép-
crito y seleccionar la vena que concuerde tica.
con el tamaño y longitud del catéter. • No elegir una vena esclerosada, la cual al
• Usar catéteres de pequeño calibre y longi- palparla parece un cordón y se mueve con
tud para la administración de antibióticos y facilidad.
líquidos de mantenimiento. • Evitar la punción de una vena dolorosa,
• Para hemoderivados, utilizar un catéter de inflamada o cercana a áreas de extravasa-
calibre 18 Ga o superior. ción o flebitis.
• Si un paciente recibe fármacos irritantes uti- • No elegir venas en zonas con trastornos
lizar catéter calibre 24-22 Ga e introducirlo de sensibilidad, puesto que, el paciente no
en una vena gruesa para facilitar la hemo- detecta alteraciones en forma temprana.
dilución y reducir la irritación de la vena. • No realizar venopunciones en miembros
• Una venopunción en la mano es apropia- paréticos.
da para catéteres de pequeño calibre como • No utilizar las venas de miembros inferio-
por ejemplo 22 y 24 Ga; catéteres de ma- res por el alto riesgo de tromboflebitis.
yor calibre están indicados en el antebra- • Evitar la punción de las venas de la cara
zo y el brazo. anterior de la muñeca, debido al riesgo de
• La vena cefálica, la cefálica intermedia o lesión de nervios y tendones durante el pro-
la basílica son las ideales. cedimiento o por extravasación el líquido
• Evitar en lo posible colocar el catéter en el infundido.
brazo dominante. • Evitar las bifurcaciones, es decir donde
• Evitar en lo posible los sitios de flexión confluyen dos venas, y mantener la punta
(flexión de la muñeca o del codo) con el fin del catéter alejada de la válvula situada en
de reducir el riesgo de extravasación. Si la Y.
es necesario, aplicar una inmovilización . • No puncionar sitios de la piel donde haya
• No intentar la punción de una vena más de lesiones (hongos, abrasiones, etc.).
dos veces ya sea por falta de experiencia,
estado del enfermo o de la vena. Solicitar
ayuda a otra persona. COMPLICACIONES
• No utilizar una vía periférica para la infusión
de sustancias irritantes o hiperosmolares • Flebitis: Consiste en la inflamación de una
(osmolaridad mayor a 500 mOs/mL) como vena debida a una alteración del endotelio.
nutrición parenteral y dextrosa a 50%. Las plaquetas migran a la zona lesionada
• Evitar el uso de venas que han presentado y alrededor de la punta del catéter comien-
flebitis. za la formación de un trombo. La agrega-
• Evitar puncionar las venas del brazo del ción plaquetaria origina la liberación de
lado de mastectomía o vaciamiento histamina, aumentando el flujo sanguíneo
ganglionar. en la zona por vasodilatación. Los signos

1344
CAPÍTULO I: ACCESOS VENOSOS DE EMERGENCIA

y síntomas característicos son: dolor mo- • Extravasación: es la infusión del líquido por
derado, enrojecimiento de la zona o el tra- fuera del vaso sanguíneo en el tejido que
yecto venoso, calor local, al palpar la vena rodea la vena. Los signos y síntomas son
tiene aspecto de cordón, puede aparecer dolor, eritema local, sensación de quema-
fiebre. Su incidencia es de 30-35%. Las fle- zón y ausencia de retorno venoso. Poste-
bitis se presentan por tres tipo de causas: riormente, se forma una ampolla que se
bacterianas, químicas y mecánicas. transforma en úlcera por el daño causado
La flebitis bacteriana se presenta por pre- a las células por el fármaco extravasado.
sencia de microorganismos en la solución, Es importante prevenir esta complicación,
contaminación del equipo durante la inser- por el daño tisular irreversible, el cual de-
ción, deficiencia en la técnica aséptica (la- pende de las características del líquido: so-
vado de manos y preparación de la piel) y luciones hiperosmolares (calcio, potasio y
ausencia o mala colocación del apósito. La glucosa); agentes de diagnóstico; adrenér-
flebitis química se debe a la irritación de la gicos (adrenalina, dopamina, dobutamina
vena por soluciones ácidas, alcalinas o y noradrenalina); soluciones irritantes a pH
hipertónicas. La flebitis mecánica se rela- básico (fenitoína, bicarbonato sódico, ace-
ciona con la infusión lenta, fijación inade- tazolamida, aciclovir y tiopental) y otros
cuada del catéter, el sitio de inserción (zo- (anfotericina, diazepam, diazóxido, doxa-
nas de flexión, tortuosidad de la vena), ca- pram, fenobarbital, gamciclovir, metocarba-
libre del catéter mayor al tamaño de la vena mol, nitroprusiato sódico, pentamidina,
y lesión en la vena puncionada. prometazina, rifampicina, tetraciclina y
Los siguientes medicamentos o grupos se vancomicina).
han identificado como agentes causales de El conocimiento de los medicamentos con
flebitis: antibióticos (63% de los casos); capacidad irritante o vesicante permite la
antivirales; anticonvulsivantes (fenitoína, elección correcta del sitio de venopunción
fenobarbital); benzodiacepinas (diazepam (idealmente en el antebrazo y evitar extre-
y midazolam), adrenérgicos (dobutamina, midades inferiores, venas de la muñeca y
dopamina, noradrenalina); anestésicos lo- del dorso de la mano, vasos de pequeño
cales (lidocaína); antiarrítmicos (amioda- diámetro, inflamados o esclerosados).
rona); antagonistas de calcio (nimodipino); Las medidas generales de manejo de la
antiulcerosos (omeprazol) y soluciones extravasación consisten en detener la in-
electrolíticas (potasio). fusión, aspirar 5 mL de sangre, administrar
Prevención de la flebitis: la identificación y 5-10 mL de diluyente, extraer el catéter,
el control de los factores de riesgo son la marcar los bordes del área afectada, ele-
base para la prevención. Se debe contar con var la extremidad y controlar la evolución.
una guía de inserción del catéter venoso pe- Las medidas específicas comprenden me-
riférico y un programa de seguimiento de dios físicos (calor para favorecer el drena-
los catéteres que permita verificar el cum- je del fármaco o frío cuando se inyecta un
plimiento de los estánderes definidos y la antídoto localmente); medidas farmacológi-
identificación temprana de complicaciones. cas mediante la administración de antído-
La flebitis química se previene mediante la tos por vía tópica o sistémica y tratamiento
utilización de de venas con buen flujo veno- quirúrgico.
so para facilitar la hemodilución, diluir los
medicamentos en 30-60 mL de solución e
infundir en un tiempo de 30-60 minutos.

1345
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

LECTURAS RECOMENDADAS 5. Garay T, Urruela M, Hernando A, et al. Efectivi-


dad en la utilización de suero salino frente a sue-
1. Arrázola M, Lerma D, Ramírez A. Complicaciones ro salino heparinizado para el lavado de catéteres
más frecuentes de la administración intravenosa periféricos obturados. Enfermería Clínica 2001;
de fármacos: flebitis y extravasación. Enfermería 11:283-288.
Clínica. 2002; 12: 80-85. 6. Stinton P, Sturt P. Urgencias en Enfermería. Edi-
2. American College of Surgeons. ATLS, Programa torial Océano. Barcelona, 2000.
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi- 7. Hadaway L. IV infiltration: not just a peripheral
cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole- problem. Nursing 2002 ; 32:36-42.
gio Americano de Cirujanos. Chicago, 1997. 8. Leigh G. Fijación de una zona de inserción IV.
3. Ellenberger A. Instauración de una vía intravenosa. Nursing 2001; 19:28-29.
Nursing 1999; 17:36-39. 9. Moureau N. Prevenir las complicaciones de los
4. Garitano B, Barberena C, Alonso V, et al. Revi- dispositivos de acceso vascular. Nursing 2002;
sión sistemática: efectividad de los cuidados en 20:14-17.
el mantenimiento de catéteres de inserción 10. Pinilla A, Arbeláez L. Terapia intravenosa en pe-
periférica. Enfermería Clinica 2002; 12:164-172. diatría. Becton Dickinson. Bogotá, 1993.

1346
CAPÍTULO II: CONTROL DE LÍQUIDOS ADMINISTRADOS Y ELIMINADOS

CAPÍTULO II

Control de líquidos administrados


y eliminados

Sandra Piedad Rivera Castro, Enf.


Clínica Fundación Valle del Lili, Cali.

CARACTERÍSTICAS DE
LOS LÍQUIDOS CORPORALES

E l agua es el componente más abundante


del cuerpo; se distribuye a través de las
células, líquidos extracelulares y las estructu-
así como el agua que genera el metabolismo
oxidativo.

ras de sostén. El agua representa un porcen- Las fuentes de excreción de agua son la ori-
taje variable entre individuos (60%, 70% y na, el sudor, las secreciones gastrointestinales
hasta 80%) del peso corporal, dependiendo y vapor en el aire espirado. Las pérdidas in-
de la edad, el sexo y el contenido de grasa sensibles en niños son de 30 a 50 mL/kg/día
corporal. Las mujeres tienen una cantidad de ó 500 mL/m2 de superficie corporal/día, las
agua corporal total correspondiente a alrede- pérdidas fecales de 8 a 10 mL/kg/día ó 100
dor del 60% del peso corporal, los hombres mL/m2 de superficie corporal/día; en adultos
del 70% y los niños del 80%. son de 300 a 500 mL/m2 de superficie corpo-
ral, las pérdidas fecales de 200 mL/día.
El agua corporal total está distribuida como
agua intracelular, en un 50–58%, el agua Los electrolitos son aquellas sustancias que
extracelular (plasma y líquido intersticial como se hallan disueltas en los líquidos del orga-
linfa y ceflorraquídeo) 38–46% y una peque- nismo: potasio, sodio, cloro, calcio, bicarbo-
ña fracción de agua transcelular 2,5% nato sódico, magnesio y fosfato. La concen-
(secreciones y excreciones). tración de estos electrolitos debe mantenerse
dentro de un rango muy estrecho correspon-
Con base en el peso corporal, los requerimien- diente a la normalidad; múltiples enfermeda-
tos usuales diarios de agua para adultos nor- des, trastornos y medicamentos pueden pro-
males varían entre 21 y 43 mL/kg; el prome- vocar desequilibrios.
dio es de 32 mL/kg y los niños requieren
aproximadamente de 100 a 150 mL/kg día. El equilibrio acidobásico es mantenido me-
diante la regulación de la concentración de
El balance de agua y electrolitos está deter- hidrogeniones en los líquidos del organismo;
minado por el volumen de agua ingerida y el se emplea el término pH para representar di-
volumen de agua excretado. Las fuentes de cha concentración. El rango normal del pH
ingesta de agua incluyen el agua consumida, plasmático es de 7,35 a 7,45. En la medida
los alimentos ricos en agua, como las frutas, que se incrementa la concentración de

1347
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

hidrogeniones se reduce el pH, provocando tes, enfermedad pulmonar obstructiva cró-


acidosis y, cuando se reduce la concentración, nica, ascitis, cáncer.
asciende el pH, lo cual significa alcalosis. • Pacientes con drenajes masivos, como
ileostomías o fístulas enterocutáneas, o as-
Los sistemas biológicos para la autorregula- piración gastrointestinal, por ejemplo, suc-
ción de la homeostasia tienen el objetivo fun- ción gástrica.
damental de enfrentarse al estrés conservan- • Pacientes con pérdidas excesivas de líqui-
do, relativamente constante, las siguientes dos y requerimientos aumentados (diarrea
variables físicas o químicas, entre otras: y fiebre, entre otros).

• Las concentraciones de los elementos san-


guíneos. PROCEDIMIENTO
• Las características de los líquidos del cuer-
po (por ejemplo, tensión o presión parcial El control de líquidos en un servicio de urgen-
del oxígeno molecular, glucosa, sodio, cias es un procedimiento enfocado al evento
potasio, bicarbonato, ácido clorhídrico, en- y al momento. Por lo tanto, no se puede es-
tre otros). perar un periodo largo de tiempo para valorar
• El volumen y pH de los líquidos corpora- la efectividad del tratamiento instaurado. Las
les. siguientes recomendaciones son esenciales
• La temperatura del cuerpo. para el control de líquidos y el mantenimiento
• La presión arterial. de la estabilidad hemodinámica.
• La frecuencia cardiaca.
• En lo posible, todo paciente que ingresa al
servicio de urgencias debe ser pesado para
INDICACIONES PARA EL permitir un cálculo más exacto de sus ne-
CONTROL DE LÍQUIDOS cesidades de líquidos.
• La administración de líquidos se hace por
• Pacientes en estado crítico por enferme- cálculos según la patología y la condición
dad aguda, con traumatismos graves o clínica individual del paciente.
grandes quemaduras. • La valoración clínica del paciente debe ser
• Pacientes en estado postoperatorio de ci- orientada a detectar signos de hipovolemia
rugía mayor. o hipervolemia (Tabla 1). Se entiende por
• Pacientes con enfermedades crónicas, ta- hipovolemia el déficit de volumen de líqui-
les como, falla cardiaca congestiva, diabe- do circulatorio y por hipervolemia el exce-
so de volumen circulatorio.

1348
CAPÍTULO II: CONTROL DE LÍQUIDOS ADMINISTRADOS Y ELIMINADOS

TABLA 1. SIGNOS Y SÍNTOMAS DE HIPOVOLEMIA E HIPERVOLEMIA

SISTEMA HIPOVOLEMIA HIPERVOLEMIA


Neuromuscular Apatía, intranquilidad, desorientación, Pérdida de atención, confusión y afasia;
letargia, debilidad muscular, hormigueo puede seguirse de convulsiones,
en las extremidades. coma y muerte.
Gastrointestinal Anorexia, náusea y vómito, diarrea, estreñimiento, Anorexia, náuseas y vomito,
calambres y distensión abdominal, sed. estreñimiento y sed.
Respiratorio Ninguno. Disnea, ortopnea, crepitantes,
tos productiva.
Cardiovascular Hipotensión (hipotensión sistólica postural), Signos de edema pulmonar (disnea,
taquicardia, colapso de las venas cervicales, ortopnea, tos, cianosis), taquipnea, edema,
disminución de la Presión Venosa Central (PVC) distensión de las venas cervicales,
incremento de la PVC, auscultación de S3.
Piel y mucosas Escasa turgencia cutánea, piel ruborizada, Piel caliente húmeda y ruborizada.
sequedad de las mucosas, surcos linguales.
Renal Oliguria, orina concentrada. Oliguria.

ACTIVIDADES cio de urgencias, que permita la visualiza-


ción completa del estado del paciente (sig-
a. Cuantificación y registro de las pérdidas nos vitales, medicación y balance de líqui-
urinarias, drenajes (sondas y tubos), he- dos). En la figura 1 se presenta un modelo
morragias, vómito y diarrea. Las aprecia- que reúne estos parámetros.
ciones deben reservarse para aquellos lí-
quidos que no pueden medirse directamen- e. El balance se realiza según necesidad; se
te; sin embargo, es preferible formular una resta la cantidad de líquidos eliminados a
apreciación a no hacer alguna anotación la cantidad de líquidos administrados. El
de la cantidad. balance normal debe ser “0”. El balance
es positivo cuando la cantidad de líquido
b. Medición de la Presión Venosa Central administrado por vía exógena es mayor que
(PVC), si la condición del paciente lo la cantidad de líquido eliminado por el or-
amerita. Permite una estimación del esta- ganismo y es negativo cuando la cantidad
do del volumen de retorno al corazón de- de líquido eliminado por el organismo es
recho. El rango normal es de 3-10 cm de mayor a la cantidad de líquido administra-
H2O. Es importante observar no sólo los do por vía exógena.
valores absolutos sino, especialmente, las
variaciones y tendencias de la PVC. f. Las irrigaciones o líquido de lavado gástri-
co no se contabilizan en el balance; su con-
c. Administración y registro de componentes trol se realiza aparte en una hoja de evolu-
sanguíneos. Identificar tempranamente ción, anotando la hora, el volumen admi-
cualquier tipo de reacción adversa. nistrado de solución de irrigación y el dre-
naje obtenido. La diferencia entre el dre-
d. Uso de una hoja de evolución de enferme- naje y la irrigación corresponde a la canti-
ría, diseñada especialmente para el servi- dad de líquido corporal eliminado.

1349
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

FIGURA 1. HOJA DE REGISTROS DE ENFERMERÍA EN URGENCIAS


EVOLUCIÓN DE ENFERMERÍA
NOMBRE
NOMBRE 1er.APELLIDO 2do.APELLIDO Año Mes Día
SIGNOS VITALES
HORA:
TA
FC
FR
T°C
SaO2
SIGNOS VITALES
HORA:
TA
FC
FR
T°C
SaO2
MEDICACIÓN
HORA:
DROGA
Dosis
Vía
Sitio
FIRMA
MEDICACIÓN
HORA:
DROGA
Dosis
Vía
Sitio
FIRMA
BALANCE DE LÍQUIDOS
ADMINISTRADOS:
HORA:
CLASE
IV
Oral
TOTAL:
ELIMINADOS:
HORA:
Orina
Vómito
SNG
Deposición
Otros
TOTAL
BALANCE

1350
CAPÍTULO II: CONTROL DE LÍQUIDOS ADMINISTRADOS Y ELIMINADOS

REANIMACIÓN CON LÍQUIDOS para mantener la estabilidad hemodiná-


mica, aunque en una medida, los líquidos
• Instaurar dos vías venosas periféricas de administrados también se desplazan des-
calibre grueso (14 ó 16Ga para adultos y de el espacio vascular hacia el área inters-
22Ga, o superior, para niños) con el líqui- ticial. El uso de coloides naturales y sinté-
do IV apropiado (Tabla 2). Obtener una ticos (por ejemplo, albúmina y almidón)
muestra de sangre para hemograma com- puede ayudar a que los líquidos se movili-
pleto, estudios de coagulación, concentra- cen desde el área intersticial hacia el es-
ciones de electrolitos y posible hemoclasi- pacio vascular; como resultado del paso de
ficación y pruebas cruzadas. líquidos de nuevo hacia el espacio vascular,
• Considerar la aplicación de una vía intra- en presencia de insuficiencia cardiaca con-
ósea en un niño en quien no puede lograrse gestiva, puede producirse edema pulmonar
el acceso venoso. Se pueden administrar agudo.
coloides, cristaloides y medicamentos. • La necesidad de administrar líquidos no tie-
• Administración de derivados sanguíneos. ne prelación sobre la vía aérea y la respi-
Usar un calentador de sangre y un dispo- ración. Los esfuerzos para canalizar una
sitivo de infusión rápida. vena no deben interferir con los procedi-
• En aquellas condiciones clínicas en que la mientos para corregir problemas de la vía
integridad de la membrana celular está al- aérea o de la respiración, los cuales son
terada (sepsis, quemaduras), se producen prioritarios.
desplazamientos masivos de líquidos ha- • Una vez iniciado el suministro de líquidos
cia el intersticio (“tercer espacio”) que dis- endovenosos, se debe medir la respuesta
minuyen el volumen sanguíneo circulante. a través de los signos vitales, estado de
La administración de líquidos es necesaria conciencia y diuresis.

TABLA 2. SOLUCIONES INTRAVENOSAS UTILIZADAS EN URGENCIAS

CRISTALOIDES DESCRIPCIÓN /ACCIONES EFECTOS SECUNDARIOS


Solución salina normal Isotónica • Puede producir sobrecarga de líquidos.
0,9% (SSN) • 25% del volumen administrado permanece en el
espacio vascular.
Solución salina 0,45% Hipotónica. Mueve líquido desde el • Disminuye la viscosidad sanguínea.
espacio vascular hacia el intersticial y el • Puede provocar la hipovolemia.
intracelular. • Puede favorecer el edema cerebral.
Dextrosa al 5% en agua Hipotónica. • Por cada 100 mL infundidos 7,5 mL permane-
destilada (DAD 5%) cen en el espacio vascular.
• Inadecuada para la reanimación con líquidos.
Solución de Lactato Isotónica. • Puede producir sobrecarga de líquidos.
de Ringer Contiene múltiples electrolitos y lactato. • Puede favorecer la acidosis láctica en la
hipoperfusión prolongada con reducción de la
función hepática.
• El lactato se metaboliza a acetato, puede
producir alcalosis metabólica cuando se
transfunden volúmenes grandes.

1351
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CRISTALOIDES DESCRIPCIÓN /ACCIONES EFECTOS SECUNDARIOS


Solución salina Hipertónica.Empuja el líquido desde el • Requiere cantidades más pequeñas para
hipertónica (7,5%) espacio intersticial e intracelular hacia el restaurar el volumen sanguíneo.
vascular. • Aumenta el oxígeno cerebral mediante el
aumento de la PIC.
• Puede provocar hipernatremia.
• Puede provocar deshidratación intracelular.
• Puede provocar diuresis osmótica.

COLOIDES SINTÉTICOS DESCRIPCIÓN /ACCIONES EFECTOS SECUNDARIOS


Dextran® Se presenta en peso molecular de 40, • Se asocia con anafilaxia.
70, 75 daltons. • Reduce el factor VIII, las plaquetas y la fusión
del fibrinógeno de manera que incrementa el
tiempo de sangrado.
• Puede interferir con las pruebas cruzadas de la
sangre y la hemoclasificación, los niveles de
sedimentación globular y la glucosa.
• Riesgo de sobrecarga de líquidos.
Heta-almidón® • Puede aumentar los niveles séricos de amilasa.
• Se asocia con coagulopatía.
• Riesgo de sobrecarga de líquidos.
COLOIDES NATURALES DESCRIPCIÓN /ACCIONES EFECTOS SECUNDARIOS
Plasma fresco Contiene todos los factores de • Potencialmente puede transmitir infecciones
congelado. coagulación. hematógenas.
• Puede producir reacción de hipersensibilidad.
• Expansor del volumen sanguíneo.
Fracción de la proteína No contiene factores de coagulación. • Puede producir reacción de hipersensibilidad.
plasmática • Si se infunde muy rápido, puede producir
(Plasmanate®) hipotensión.
• Expansor del volumen sanguíneo.
Albúmina 5% isooncótica2,5% hiperoncótica baja • Preferido como expansor de volumen cuando
en sal. hay riesgo de producir edema intersticial.
• Hipocalcemia.
Sangre total Puede administrarse sin solución salina • Hipercalemia, hipotermia e hipocalcemia.
normal; reduce la exposición al donante. • Puede requerir una cantidad mayor que los
glóbulos rojos concentrados para aumentar la
capacidad de transporte de oxígeno de la
sangre.
• Se usa rara vez, no es efectiva según costos.
Glóbulos rojos Se diluyen en solución salina normal. • Deficiente en 2,3-difosfoglicerato, de manera
concentrados que puede incrementar la afinidad del oxígeno
por la hemoglobina, y puede disminuir la
entrega de oxígeno a los tejidos.
• Hipotermia, hipercalemia e hipocalcemia.

1352
CAPÍTULO II: CONTROL DE LÍQUIDOS ADMINISTRADOS Y ELIMINADOS

RECURSOS NECESARIOS • Dispositivos volumétricos: administran un


volumen específico en un tiempo dado en
La calidad del control de los líquidos adminis- mL/hora como el Buretrol®.
trados y eliminados que realiza la enfermera
está relacionada con el conocimiento y las
ayudas tecnológicas de las cuales dispone
para ejecutar el procedimiento (fórmulas de
cálculo de líquidos a administrar y de pérdi-
das, bombas de infusión, sistemas de drena-
jes, etc.).

DISPOSITIVOS PARA LA INFUSIÓN DE


LÍQUIDOS INTRAVENOSOS
• Bombas de infusión: aplican presión posi-
tiva a la vía para superar al flujo; están di-
señadas con mandos de ajuste calibrados
en mL/hora. Comercialmente se conocen
las bombas Life-Care®, XL3® de labora-
torios Abbott y las bombas Flo-Gard®,
Damby® de laboratorios Baxter, entre
otras.

Hoy en día la enfermera dispone de tecnolo-


gía y equipos que facilitan la administración
de líquidos en forma segura y permiten la
cuantificación exacta. En nuestro medio se
encuentran disponibles:

• Dispositivos no volumétricos: administran


la solución en gotas/min (los equipos de
microgoteo, macrogoteo, extensión de
anestesia y equipos para transfusión).

• Infusor similar al manguito de un tensió-


metro para comprimir la bolsa de infusión
endovenosa.
• Infusor con bomba neumática electrome-
cánica permite obtener infusión rápida y de
soluciones tibias.

1353
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ELEMENTOS PARA LA MEDICIÓN FÓRMULAS PARA EL CÁLCULO DE LAS


DE LÍQUIDOS ELIMINADOS NECESIDADES CORPORALES DE LÍQUIDOS

• Recipiente para medir (gramurio). • Los requerimientos diarios teniendo en


• Drenaje cerrado para tubo de tórax (Pleuro- cuenta la superficie corporal son de 1500-
Gard®). 2000 mL/m2 de superficie corporal/día. La
• Sistema cerrado para aspiración gástrica tabla 3 muestra una guía general.
(Receptal®, Medivac®).
• Báscula (peso de pañales, apósitos, etc.). Superficie corporal = (peso en kg + estatura
• Sistema de recolección de drenaje urina- en cm – 60) / 100
rio (Cistoflo®, bolsa de pierna).
• Sistema cerrado de drenaje de sangre
(Hemovac®, Jackson Pratt®).

TABLA 3. CÁLCULO DE LÍQUIDOS BASALES

PESO DEL PACIENTE (kg) VOLUMEN A ADMINISTRAR

Hasta 10 100 mL/kg/24 h

11 – 20 50 mL/kg/24 h + 100mL/kg para los primeros 10 kg

Mayor de 20 20 – 25 mL/kg/24 h + 50 mL/kg por cada kg


de los 11 – 20 kg + 100 mL/kg por los primeros 10 kg

• Reposición de volumen con cristaloides: • Pérdidas intestinales: reponer 1 mL por


administrar 3 mL de solución por cada mL cada mL perdido cada 4 horas. Usar lactato
de líquido corporal perdido. de Ringer.
• Reposición de volumen con coloides: ad-
ministrar 1 mL por cada mL de líquido cor- FÓRMULAS PARA EL CÁLCULO
poral perdido. DE LA VELOCIDAD DE GOTEO IV

Al iniciar la reposición de líquidos se suminis-


REPOSICIÓN DE VOLUMEN PARA tran de 1000 a 2000 mL en el adulto y 20 mL/
LAS PÉRDIDAS MEDIDAS kg de peso en el paciente pediátrico a gran
velocidad sin riesgo significativo. En un
• Pérdidas gástricas: reponer 1 mL por cada paciente adulto en shock hipovolémico, sin
mL perdido cada 4 horas. Usar DSS 5% enfermedad cardiopulmonar previa, corres-
más 30 mEq de cloruro de potasio por litro. ponde a un tercio de la volemia estimada, es
decir, el equivalente a la pérdida capaz de
producir shock.

1354
CAPÍTULO II: CONTROL DE LÍQUIDOS ADMINISTRADOS Y ELIMINADOS

Fórmula para cálculo de goteo

Volumen en mililitros x factor goteo del equipo = gotas x minuto


Tiempo en minutos (horas x 60)

Factor de goteo de los equipos: las casas comerciales tienen estandarizado el factor goteo de
los equipos de infusión (Nº de gotas/mL):

• Equipo de microgoteo = 60 gotas/mL (uso pediátrico).


• Equipo de macrogoteo = 10 gotas/mL.
• Equipo de normogoteo = 20 gotas/mL.
• Equipo de transfusión de sangre = 15 gotas/mL

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Proelh JA, Wood T. Emergency Nursing


Procedures. Second edition. WB Saunders.
Philadelphia, 1999.
2. Emergency Nurses Asociation. Enfermería de Ur-
gencias. McGraw Hill. Madrid, 2001.
3. Lopategui E. Mecanismo de control homeostático.
www. Saludmed.com. 2001.
4. Patiño JF. Líquidos y electrolitos en la práctica
médica. Trib Med 1989; 80:1-14.
5. Patiño JF. Líquidos y electrolitos en cirugía. En:
Lecciones de Cirugía. Por JF Patiño. Editorial
Médica Panamericana. Buenos Aires-Bogotá,
2001.
6. Tucker S, Canobbio M. Diagnósticos básicos de
enfermería. Necesidades especiales y
equipamiento. En: Normas de Cuidados del Pa-
ciente. Sexta edición. Harcourt Océano. Barcelo-
na, 2002.

1355
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO III

Lavado gástrico

Lucy Carolina López Alba, Enf.


Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá.

INTRODUCCIÓN

E l empleo de una sonda hueca para eva-


cuar venenos data de principios del siglo
XIX. Se le concede el crédito de la creación
INDICACIONES

• Eliminación de sustancias tóxicas. No se


del lavado gástrico para el tratamiento de debe usar en forma rutinaria, tal como se
intoxicaciones a Kussmal en 1869. explica en la guía
• Agentes Tóxicos y Corrosivos; se puede
El lavado gástrico se encuentra dentro de las optar por esta técnica cuando el paciente
técnicas de vaciamiento gástrico, que es efec- ha tomado una dosis tóxica de una sus-
tiva para prevenir la absorción de tóxicos. tancia y el procedimiento puede llevarse a
cabo dentro de la hora siguiente a la
La enfermera es quien realiza el lavado gás- ingesta.
trico; por lo tanto, debe tener claridad en cuan- • Irrigación en pacientes con hemorragia
to a las indicaciones, las contraindicaciones y gastrointestinal superior que tienen úlce-
la atención integral de enfermería que debe ras con coágulos para ayudar a evacuarlos.
recibir el paciente; esta guía ha sido elabora- • Instilación de sustancias quelantes o
da para ofrecer pautas que permitan su reali- catárticos.
zación en forma eficaz y eficiente, con el máxi-
mo de seguridad y el mínimo de incomodidad
para el paciente. CONTRAINDICACIONES

• Vía respiratoria no protegida: el paciente


DEFINICIÓN sin reflejo nauseoso, obnubilado o coma-
toso requiere intubación endotraqueal pre-
El procedimiento se usa para limpiar el estó- via al lavado gástrico para prevenir aspira-
mago de sangre, venenos, tóxicos u otras ción.
sustancias; un tubo es insertado en el estó- • Posible ingestión de sustancias alcalinas
mago, y a través de éste se irrigan fluidos que potentes.
posteriormente se extraen para remover el • Estrechez esofágica conocida.
material que pueda estar contenido dentro del • Ingestión de caústicos por el riesgo de
órgano. perforación del esófago.

1356
CAPÍTULO III: LAVADO GÁSTRICO

• Ingestión de hidrocarburos por el riesgo de • Sonda de Levin: es un tubo de luz única


aspiración y neumonitis química. en PVC, cuyos calibres son 8, 10, 12, 14,
• Pacientes que han ingerido cuerpos extra- 16, 18 Gauth.
ños grandes, afilados o paquetes de • Sonda gástrica de Salem o Ventron Levin:
alcaloides. es una sonda con doble luz con dos aber-
• Paciente con riesgo de hemorragia o per- turas; una para succión y otra que para
foración gástrica a raíz de enfermedades permitir el flujo de aire. Los calibres son
u operaciones recientes. 10, 12, 14, 16 y 18 French.
• La inserción de una sonda por vía nasal • Sonda del equipo de lavado gástrico
está contraindicada en lactantes, puesto Code Blue Easi–Lav®: para adultos de
que respiran de forma obligatoria por la calibre 18 a 40 Fr y para uso pediátrico
nariz; se utiliza la vía orogástrica. También de 18 a 28 Fr. Las sondas de calibre
se encuentra contraindicada, en presencia mayor a 36 Fr se colocan por la boca.
de traumatismo craneal, lesión maxilofacial 5. Lubricante hidrosoluble.
o fractura de la fosa anterior del cráneo, 6. Equipo de aspiración faríngea.
puesto que existe el riesgo de penetración 7. Protector oral (para la inserción de una
inadvertida al encéfalo a través de la placa sonda orogástrica).
cribiforme o del hueso etmoides; en estos 8. Jeringa de 50 mL con punta de catéter.
pacientes se recomienda la vía orogástrica. 9. Solución salina normal o agua corriente
tibia (37º C).
10. Estetoscopio.
SISTEMAS DE LAVADO 11. Toallas de papel.
12. Esparadrapo.
En la Tabla 1 se presentan los sistemas de 13. Cubeta de recolección de líquido
lavado gástrico, sus ventajas y desventajas. (“riñonera”).
14. Sistema de tubos de lavado: disponibles
EQUIPO comercialmente Code Blue Easi-LavR o
pueden construirse con un conector en
Y, tubos de extensión para aspiración y
1. Bata. bolsas para enema, o un sistema de la-
2. Guantes limpios. vado con jeringa punta de cateter.
3. Gafas protectoras.
4. Una sonda de gran calibre con orificios
localizados en el extremo distal, la cual
exhibe probabilidad de recuperar con
éxito partículas de material tóxico. Las
sondas disponibles son:

1357
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. SISTEMAS DE LAVADO GÁSTRICO

SISTEMA PASIVO SISTEMA ACTIVO SISTEMA MIXTO


También se denomina sistema de gravedad cerra- Sistema de una sola jeringa. Es un sistema cerrado de doble je-
do. Emplea un conector en—“Y” unido a una bolsa Es el método más eficaz y ringa. Combina lo mejor del sistema
para fluido, a una bolsa de drenaje y a la sonda eficiente para remover dese- activo y pasivo. Se considera un sis-
gástrica. La bolsa para fluido se coloca suspendida chos del estómago. Emplea tema activo que con una jeringa pro-
por encima del nivel del paciente, se pinza la rama una jeringa bomba para in- duce agitación mecánica dentro del
de la conexión a la bolsa de drenaje y, por efecto troducir el fluido dentro del estómago, lava el interior extrayen-
de la gravedad, la solución pasa a la cavidad estómago, se agita el conte- do material de los pliegues estoma-
gástrica; a continuación se pinza la rama de la bol- nido y luego se realiza la cales, desprende fragmentos y los
sa de fluido y se abre la rama de drenaje para per- succión.Este es un sistema evacúa en una forma rápida. Además
mitir la salida del contenido del estómago, igual- abierto que requiere conec- es un sistema cerrado que no requie-
mente por gravedad. Tanto el conector en “Y” como tar y desconectar la jeringa re desconexión en el tubo gástrico;
el tubo ofrecen cierta resistencia al paso de líquido; de bombeo, lo cual represen- es rápido, limpio y necesita 1 o 2 ope-
cabe realizar aspiración intermitente de la sonda ta un riesgo de exposición a radores para el procedimiento. La
para incrementar el vaciamiento gástrico. Este sis- líquidos corporales para el principal desventaja puede ser el
tema de lavado es ineficiente para la remoción de operador. costo del equipo y la disponibilidad
sustancias y puede ocurrir rápida distensión gástrica en el mercado. Comercialmente se
si no se controla el ingreso de líquido; es deficiente conoce como Code Blue Easi–LavR .
en desintegrar tabletas, porque no produce agita-
ción del contenido gástrico y sin agitación el por-
centaje de absorción permanece alto y el tiempo
de lavado para que el líquido salga claro se prolon-
ga 8 a 10 veces.

ATENCIÓN DE ENFERMERÍA

La atención de enfermería del paciente en • Valoración clínica del paciente para verifi-
quien se realiza un lavado gástrico se divide car la permeabilidad de la vía aérea, venti-
en tres etapas: antes del procedimiento y la lación, circulación y estado neurológico.
inserción de la sonda gástrica, durante el la- • Lavado de manos.
vado gástrico y las actividades posteriores al • Colocación de la bata, las gafas protecto-
procedimiento. ras y los guantes limpios.
• Disposición de un sistema de aspiración de
secreciones.
ANTES DEL LAVADO GÁSTRICO • Remoción de las prótesis dentales.
• Colocación del paciente en una posición
• Si el paciente colabora, explicar el proce- adecuada: sentado para la inserción de la
dimiento, proporcionando la información sonda en pacientes que están conscien-
necesaria para que actúe según se le indi- tes; si el paciente se encuentra obnubilado
que con el fin de obtener el mejor resulta- o en coma se coloca en decúbito lateral
do en el menor tiempo posible y por lo tan- izquierdo. Para realizar el lavado se colo-
to con la menor molestia para él. ca el paciente en decúbito lateral izquierdo

1358
CAPÍTULO III: LAVADO GÁSTRICO

en Trendelenburg (cabeza hacia abajo en- lanta nada intentando una introducción muy
tre 10º a 15º); esta posición disminuye el rápida, pues lo único que se consigue es
paso del contenido gástrico hacia el duo- lesionar las zonas por donde discurre la
deno durante el lavado y disminuye el ries- sonda.
go de aspiración pulmonar del contenido 8. Si el paciente presenta tos, estridor, ciano-
gástrico si se producen arcadas o vómito. sis o no puede hablar se debe sospechar
que la sonda está en la tráquea; en este
caso se debe retirar la sonda, tranquilizar
PROCEDIMIENTO PARA LA INSERCIÓN el paciente e intentar el procedimiento nue-
DE LA SONDA GÁSTRICA vamente.
9. Se verifica la colocación de la sonda aspi-
1. En el adulto se mide la distancia entre la rando el contenido gástrico o inyectando
punta de la nariz y el lóbulo de la oreja más 20 a 30 mL de aire con una jeringa mien-
la distancia desde el lóbulo de la oreja al tras se ausculta el burbujeo de aire sobre
extremo de apéndice xifoides, y se marca el epigastrio.
esta distancia en la sonda. En el niño se 10. Se asegura la sonda al dorso de la nariz
mide la distancia desde el lóbulo de la ore- con esparadrapo y el extremo distal con
ja hasta el punto intermedio entre el apéndi- una pinza nodriza y esparadrapo a la bata
ce xifoides y el ombligo. La medición de la del paciente. Esto último para que, en caso
longitud de la sonda evita que algún seg- de tracción accidental de la sonda, se evi-
mento excedente del tubo se enrolle den- ten desplazamientos o traumatismos.
tro del estómago; una sonda de longitud
excesiva puede producir distensión, trau-
matismo de la mucosa y perforación del PROCEDIMIENTO PARA LA INSERCIÓN
estómago; por el contrario, una sonda de DE LA SONDA OROGÁSTRICA
longitud corta puede dar por resultado el
lavado del esófago con un riesgo mayor de 1. Se mide la distancia entre los labios y el
emesis y aspiración. ángulo de la mandíbula más la distancia
2. Examen de la nariz para seleccionar la fosa desde la mandíbula al apéndice xifoides,
nasal permeable. y se marca la sonda en este punto.
3. Lubricación de la punta de la sonda. 2. Se coloca el protector oral.
4. Colocación de la cabeza del paciente en 3. Se pasa la sonda con suavidad por la boca,
posición neutra. dirigiéndola hacia abajo y hacia atrás en
5. Inserción de la sonda a través del orificio dirección a la faringe.
nasal en un ángulo de 60 a 90 o respecto al 4. Se continúa con el sexto paso de inserción
plano de la cara. de la sonda nasogástrica.
6. Una vez que la sonda esté en la orofaringe,
el paciente debe flexionar la cabeza hacia
adelante y deglutir varias veces. El tubo es LAVADO GÁSTRICO
avanzado, mientras el paciente deglute,
hasta el punto demarcado previamente en • El lavado gástrico se inicia una vez se haya
la sonda. comprobado la correcta ubicación de la
7. La introducción de la sonda ha de ser sua- sonda en el estómago.
ve y continua aprovechando los movimien- • El lavado puede efectuarse con agua co-
tos de deglución del paciente. No se ade- rriente o con solución isotónica tibia (37 ºC)

1359
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

para evitar la hipotermia del paciente, au- puede recibir dosis adicionales por medio
mentar la solubilidad de las sustancias in- de una sonda nasogástrica estándar.
geridas y retrasar el vaciamiento gástrico.
• Se instilan entre 150 y 300 mL en adultos y DESPUÉS DEL PROCEDIMIENTO
entre 10 a 15 mL/Kg o 50 a 100 mL en los
niños; se deja en el estómago durante unos • El paciente debe quedar cómodo y con el
minutos y a continuación se aspira o se deja máximo bienestar posible.
drenar. Volúmenes mayores incrementan • Se debe explicar al paciente y la familia la
el riesgo de que el contenido gástrico se posibilidad de vómito, mareo, molestias o
desplace hacia el duodeno y las cantida- dolor.
des menores no son prácticas debido al es- • Se registra en la historia clínica, la técnica
pacio muerto del tubo (aproximadamente ejecutada, el tipo de solución utilizada, el
50 mL en el caso de una sonda calibre 36 balance de entrada y salida de líquido, las
Fr). La cantidad de líquido que se recupe- características del drenaje, la respuesta del
ra debe ser similar a la que se introdujo. paciente y los problemas presentados du-
• La agitación manual del estómago, antes rante el procedimiento.
de extraer el líquido administrado, puede
incrementar la recuperación de material
tóxico; para ello se realiza compresión sua- COMPLICACIONES
ve de la pared abdominal sobre el epigas-
trio. Relacionadas con la colocación de la sonda:
• El volumen total óptimo de solución de la-
vado no se puede establecer; una reco- • Lesión de los cornetes nasales, de la mu-
mendación frecuente es de 1-2 litros adi- cosa nasal que produce epistaxis, lesiones
cionales después de que el líquido recu- de faringe, esófago o estómago al realizar
perado sea claro. la introducción de la sonda por la vía nasal
• Hay que disponer de un equipo de aspira- o durante el avance de la sonda.
ción si el paciente presenta vómito duran- • El paciente puede presentar laringoespas-
te la técnica. mo.
• Una vez terminado el lavado, puede estar
indicada la administración de un medica- Durante el lavado:
mento quelante o catártico, como carbón
activado o sulfato de magnesio, a través • Alteración en la función cardiorrespiratoria:
de la sonda gástrica. Cuando ésta ya no taquicardia y taquipnea, así como disminu-
se necesita, se extrae cerrada para evitar ción de la saturación de oxígeno. El excesi-
el “escurrimiento” del contenido gástrico vo estímulo vagal, ocasionado por el refle-
hacia la vía respiratoria. jo nauseoso, puede originar bradiarritmias.
• Dado el creciente empleo de dosis repeti- • Alteración hidroelectrolítica por la gran can-
das de carbón activado, la sonda gástrica tidad de líquido que se emplea durante el
se deja después de concluir el lavado. Sin procedimiento; este problema se puede en-
embargo, como esta gran sonda es irritan- contrar más en los niños.
te y puede predisponer a reflejo faríngeo, • Hipotermia como complicación durante el
babeo o aspiración, deberá retirarse. El pa- lavado gástrico con líquidos fríos o como
ciente alerta debe tomar las dosis subse- agravante de la condición del paciente por
cuentes por vía oral. El paciente obnubilado su patología.

1360
CAPÍTULO III: LAVADO GÁSTRICO

• Aspiración del contenido gástrico o líquido sicas de Enfermería. Cuarta edición. Fondo Na-
de lavado a los pulmones: en pacientes que cional Universitario. Universidad Nacional de Co-
presentan disminución del nivel de cons- lombia, Bogotá, 1992.
3. Davis R. Gastric lavage in The United States.
ciencia y disminución del reflejo nauseoso,
BallarR Medical Products. Draper, 1992.
por lo cual se recomienda protección de la 4. Esteve J, Mitjoins J. Enfermería Técnicas Clíni-
vía aérea, la colocación de la sonda orogás- cas. Primera edición. McGraw Hill. Madrid, 2000.
trica, la instilación de 150 – 300 mL en adul- 5. Grierson R, Green R, Sitar D, et al. Gastric lavage
tos y de 10-15 mL/kg o 50-100 mL en los for liquid poisoning. Ann Emerg Med 2000; 35:435–
niños y la posición adecuada del paciente. 439.
La aspiración puede producir neumonía; 6. Hayes L. ¿Cuál es su actuación ante una ingesta
esta complicación no es fatal, pero lleva a de tóxicos? Nursing 2001; 19: 8–13.
7. Jones A, Volans G. Management of self poisoning.
una alta morbilidad e incremento en los
BMJ 1999; 319:1414– 1417.
costos del manejo asistencial. 8. Jordan KS. Lavado gástrico. En: Enfermería de
• Sobredistensión: ocurre cuando se admi- Urgencias. Editado por Emergency Nurses
nistra un exceso de líquido dentro del es- Asociation. McGraw Hill. Madrid, 2001.
tómago; esto puede facilitar el vómito y por 9. Lord L. Introducción de una sonda nasogástrica
ende aumentar el riesgo de aspiración. de gran calibre. Nursing 2002; 20:24–26.
Asimismo, se produce un efecto hidráulico 10. Mckinney P. Descontaminación del paciente intoxi-
de empujar el contenido gástrico a través cado. En: Procedimientos clínicos, Medicina de
urgencias. Editado por J Roberts, J Hedges.
del píloro hacia el duodeno haciendo invá-
McGraw Hill. México, 2000.
lido el lavado gástrico y la remoción de 11. Morillo FJ. Manuales Prácticos de Enfermería.
material tóxico. Edición especial. McGraw Hill. Bogotá, 1997.
• Sangrado: puede ocurrir como resultado de 12. Potter Do, Rose MB. Urgencias en Enfermería.
una succión agresiva durante el procedi- Interamericana. México, 1987.
miento. 13. Proehl J. Procedimientos en Enfermería de Urgen-
• Lavado pulmonar: es una complicación in- cias. Segunda edición. McGraw Hill. Madrid, 2000.
usual y ocurre cuando la sonda queda mal 14. Shrestha M, George J, Chiu M, et al. A comparison
of three gastric lavage methods using the
colocada o se desplaza de su posición.
radionuclide gastric emptying study. Ballard R
• Perforación: puede ser del esófago o del Medical Products. Draper, 1992.
estómago; es la más rara de las complica- 15. Smeltzer S, Bare B. Enfermería Medicoquirúrgica
ciones. de Brunner y Suddarth. Novena edición. McGraw
Hill. México, 2002.
16. Sparks K. Lavado gástrico. En: Urgencias en En-
LECTURAS RECOMENDADAS fermería. Editado por P Kidd, P Sturt. Harcourt/
Oceano. Barcelona, 1998.
1. Baily E, Lloyd M, Marchesseault L, et al. Enciclo- 17. Tabasco J, Roseman S. Evaluation of a new
pedia de la Enfermería. Oceano/Centrum. Barce- method of gastric lavage in the management of
lona, 1997. upper gastrointestinal bleeding. Ballard R Medical
2. Buitrago M, Pinzón E, Gutierrez E, et al. Princi- Products. University of Pittsburg, 1992.
pios Científicos aplicados en las Actividades bá- 18. Zimmerman J. Manegement issues in toxicology.
Resp Crit Care Med 2001; 22:23–28.

1361
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IV

Guía de manejo de sondas y drenajes

Soraya Chalela Serrano, Enf. Ministerio de Protección Social.


Exdirectora del Depto. de Enfermería, Instituto Nacional de Cancerología.
María Gladis González, Enf. Instituto Nacional de Cancerología.

E n esta guía se presenta el manejo de al-


gunos de los sistemas de drenaje que más
se utilizan en un hospital. Aunque algunos de
a una cámara-reservorio de succión. Gene-
ralmente, consta de uno o dos tubos conecto-
res de material de polivinilcloruro o de silastic
ellos no se colocan en los servicios de urgen- que desembocan en el reservorio colapsable.
cias, un paciente que ingresa a urgencias por En el extremo proximal tiene un estilete afila-
complicaciones postoperatorias u otras con- do para hacer la punción percutánea, el cual
diciones patológicas puede traerlos ya instau- es retirado inmediatamente después de su
rados. Estos sistemas son: ubicación, y a continuación se encuentran los
orificios de drenaje.
• sonda con aspirador portátil para heridas
(Hemovac®).
• dren de Sump. INDICACIONES
• catéter uretral.
• toracostomía cerrada. Promover la cicatrización de la herida, elimi-
• succión nasogástrica. nando los líquidos (seromas, hematomas),
que pueden retrasar la granulación tisular, y
El manejo de los dos últimos se puede con- permitir la adhesión de las capas de tejido
sultar en las guías de manejo de Drenaje y suprimiendo el espacio muerto.
Succión Pleural, Sondas Enterales y Lava-
do Gástrico, de esta serie.
INSTALACIÓN Y MANEJO
DEL ASPIRADOR PORTÁTIL
MANEJO DEL ASPIRADOR
Equipo
PORTÁTIL PARA HERIDAS
(HEMOVAC® – EXOVAC® – PORTOVAC®) 1. Unidad de succión portátil: contiene una
aguja de acero inoxidable, maleable, de
borde cortante de diferentes diámetros (3,2
DEFINICIÓN mm; 4,8 mm; 6,4mm) y longitud de 160 mm.
2. Sonda de succión perforada no colapsable,
Es un sistema de aspiración cerrado que fun- de distintos diámetros (3,2 mm; 4,8 mm;
ciona con presión negativa y elimina suave- 6,4 mm) y 1,25 m de longitud.
mente el líquido y los desechos de una herida 3. Tubo con conector múltiple y unidad de
por medio de una sonda perforada conectada vacío: consiste en un recipiente de plásti-

1362
CAPÍTULO IV: GUÍA DE MANEJO DE SONDAS Y DRENAJES

co irrompible, con bordes rígidos y lados ciendo una presión negativa de 45 mmHg,
colapsables (tipo acordeón y con un resor- aproximadamente. Se fija a la piel.
te de acero en el interior para conservar • Mantenimiento y evacuación del sistema:
separados sus extremos) de capacidad - Valoración y limpieza del sitio de inser-
variable desde 200 mL hasta 800 mL. Tie- ción del sistema.
ne un orificio con manguito en el que se - Colocación de vendaje compresivo
ajusta firmemente el tubo para conexión y cuando sea necesario.
un orificio con tapón (Figura 1). - Evaluar periódicamente el sistema para
detectar desconexiones accidentales o
pérdida del vacío en el reservorio.
- Evacuar el reservorio en recipiente cali-
brado o verificar la cantidad aspirada
utilizando la escala de medición del sis-
tema.
- Evaluar las características de lo drenado
y registrar en la historia clínica (volumen,
características, frecuencia de vacia-
miento).

Complicaciones

• Obstrucción con fluidos o detritos.


Figura 1. Sistema de aspiración portátil. • Desplazamiento o desalojo.
• Lesión del tejido en el sitio de inserción por
presión constante o errores en la inmovili-
4. Guantes estériles. zación.
5. Solución salina normal. • Infección.
6. Solución antiséptica.
7. Gasas y apósitos estériles.
8. Cinta adhesiva. MANEJO DEL DREN DE SUMP

Procedimiento DEFINICIÓN

• Inserción del tubo: es un procedimiento Es un sistema de succión cerrado de doble


quirúrgico que realiza el médico. Se utiliza luz que se utiliza para drenar, principalmente,
una transfixión para que el orificio cierre la cavidad peritoneal. El tubo es relativamen-
más estrechamente y se asegure óptima te rígido, de material de polivinilcloruro o de
succión; de inmediato es conectado al silastic, radiopaco. Se encuentra disponible en
reservorio. dos calibres 14 y 18 Fr. En su extremo
• Aspiración: conectar los tubos al reservorio proximal tiene orificios que comunican con la
y ejercer presión hasta colapsarlo; a conti- vía de drenaje y en el extremo distal presenta
nuación se cierra la entrada del aire y se orificios más pequeños que comunican con la
verifica que el sistema se expanda produ- vía del aire.

1363
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

INDICACIONES • Lesión del tejido en el sitio de inserción del


dren por presión constante y prolongada
• Evacuación de grandes volúmenes de flui- permanencia o errores en la movilización.
do desde cavidades corporales profundas • Infección.
(por ejemplo, secreciones entéricas o
pancreáticas).
• Evacuación de detritos, coágulos o mate- CUIDADOS DE ENFERMERÍA
rial viscoso.
• Canalización del drenaje en fístulas de alto • Mantener la succión conectada y activa.
flujo (por ejemplo, enterocutáneas). • Nunca ocluir con gasa ni esparadrapo los
orificios de la vía del aire.
Equipo • Realizar curación del sitio de inserción.
• Limpiar con SSN la piel circundante.
1. Dren de sump. • Curación con solución antiséptica en el si-
2. Manómetro de succión. tio de inserción del dren.
3. Caucho de látex para succión. • Colocar dos gasas precortadas opuestas
4. Recipiente para drenaje (Receptal®). rodeando el tubo.
5. Conector o empate. • Fijar con esparadrapo hipoalergénico.
6. Esparadrapo de tela e hipoalergénico. • Fijar las uniones e inmovilizar el sistema
7. Material de curación (guantes estériles, en la piel próxima al sitio de inserción del
gasas, solución salina normal (SSN), solu- tubo.
ción antiséptica). • Control de líquidos administrados y elimi-
nados: evaluación del balance.
Procedimiento

• El tubo es colocado por el cirujano durante PRECAUCIONES


el acto quirúrgico y exteriorizado a través
de la pared abdominal por un sitio diferen- • Evitar acodamientos en el sistema.
te a la incisión quirúrgica, para disminuir el • Evitar tracciones del tubo durante la movi-
riesgo de infección de la herida y no com- lización del paciente.
prometer la suplencia sanguínea, lo cual • Evitar contacto del drenaje con la piel cir-
retarda el proceso de cicatrización. El dren cundante.
es conectado a una fuente de succión. • Verificar la permeabilidad de los orificios de
• Succión: conectar el empate de Simps a la la vía del aire.
vía de drenaje y ésta a un tubo de caucho • Sugerir su retiro cuando cese su función:
que va a la succión, a una presión de 80- evitar el uso prolongado innecesario.
120 mmHg. • En fístulas entero-cutáneas se debe dis-
minuir progresivamente el calibre del tubo,
Complicaciones a medida que va disminuyendo el tamaño
de la fístula.
• Obstrucción con fluidos o detritos por flujo • Recordar que el drenaje de fluido por la vía
retrógrado al suspenderse accidentalmen- del aire, indica obstrucción, o sea, que el
te la presión de succión. sistema no está funcionando.
• Desplazamiento o desalojo.

1364
CAPÍTULO IV: GUÍA DE MANEJO DE SONDAS Y DRENAJES

CATETERISMO VESICAL • Introducción de un catéter a la vejiga a tra-


vés del canal uretral para evacuar conteni-
DEFINICIÓN do vesical.

Es la colocación de una sonda a través de la


uretra hasta la vejiga para drenar orina. CARACTERÍSTICAS DE LAS SONDAS

El cateterismo vesical es un procedimiento Las sondas son tubos de consistencia varia-


común en los pacientes que acuden a los ser- ble (rígidos, semirrígidos, blandos) dependien-
vicios de urgencias y en los hospitalizados do del material (látex, plástico, silicona,
(alrededor de 10-15% de los pacientes) y siliconadas, con cuerpos rígidos en su inte-
constituye el principal factor de riesgo de in- rior). Su tamaño está calibrado en unidades
fección urinaria, la cual prolonga la estancia Fr que miden la circunferencia externa. Exis-
hospitalaria entre 2 y 10 días. La infección ten sondas con calibre desde 8Fr hasta 30Fr.
urinaria en los pacientes hospitalizados es Las sondas vesicales poseen uno o varios
más grave que en los ambulatorios, puesto orificios en su parte distal; la forma y el tama-
que el sujeto receptor tiene una patología pre- ño de éstos dependen del tipo de sonda y de
via que puede haber deteriorado sus meca- su indicación. En su interior pueden tener has-
nismos de defensa y los agentes causales son ta tres vías distintas: las sondas de una sola
gérmenes hospitalarios más resistentes a los vía son generalmente rígidas y se utilizan para
antibióticos. cateterismo intermitente; cuando tienen dos
vías, una de éstas corresponde al balón que
El sistema de drenaje abierto favorece la apa- sirve para fijarla, y la otra es la vía de drenaje
rición de bacteriuria en el 50% de los pacien- y en las sondas de tres vías, la tercera vía se
tes durante las primeras 24 horas del utiliza para irrigar la vejiga de forma continua
cateterismo y en casi el 100% antes de termi- (Figura 2).
nar el cuarto día.

La incidencia global de bacteriuria en pacien-


tes con sistema de drenaje cerrado es 3-10%
por día catéter y 50% de los pacientes porta-
dores de sonda vesical presentan infección
entre los 11 y los 13 días tras la colocación de
la sonda. Los mecanismos de contagio más
comunes son:

• Contaminación en el momento del cate-


terismo por microorganismos de la región
perineal.
Figura 2. Tipos de sondas vesicales.
• A través de las manos del personal de sa-
lud.
La elección de la sonda depende de la condi-
• Migración retrógrada de los microorganis-
ción clínica que presenta el paciente y de sus
mos por la luz del catéter.
características físicas. El calibre que más se
• Soluciones antisépticas e instrumental con-
utiliza en el adulto es 16Fr, con variaciones
taminados.

1365
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de 14-16Fr para las mujeres y 18-20Fr para EQUIPO


los hombres. El catéter vesical debe elegirse
de un calibre menor al del meato urinario. 1. Guantes limpios y estériles.
2. Solución salina normal o agua estéril (5–
10 mL).
INDICACIONES 3. Solución antiséptica.
4. Gasas estériles.
• Preparación de procedimientos quirúrgicos 5. Lubricante y anestésico local (Xylocaina®
abdominales. Jalea).
• Retención urinaria. 6. Sonda según indicación del procedimiento
• Recolección de una muestra de orina es- (Folley®, Nelaton®, tres vías).
téril. 7. Sistema para drenaje urinario (Cystoflo®).
• Determinación de orina residual después 8. Esparadrapo.
de una micción espontánea. 9. Cubeta para recolección de líquidos
• Permitir la cicatrización de vías urinarias “Riñonera”.
tras la cirugía. 10. Jeringa desechable de 10 mL.
• Irrigación vesical en caso de hematuria o 11. Frasco para recolección de muestra, en
administración de medicamentos. caso de ser necesario.
• Mantener seca la zona genital en pacien-
tes incontinentes (en situaciones especia-
les, nunca por comodidad del equipo de en- PROCEDIMIENTO
fermería).
• Control estricto de líquidos en pacientes 1. Revisión de la historia clínica.
graves o hemodinámicamente comprome- 2. Valoración clínica del paciente.
tidos. 3. Explicación del procedimiento al paciente;
• Alteración en el estado de conciencia. permitirle expresar sus dudas y preservar
• Trauma abierto de tejidos blandos en re- su intimidad.
gión perineal. 4. Solicitud y preparación de los materiales
• Politraumatismo. requeridos.
• Trauma raquimedular. 5. Lavado de manos y colocación de guantes
limpios.
6. Lavado de los genitales externos del pa-
CONTRAINDICACIONES ciente: en los hombres, retraer el prepucio
y limpiar el surco bálano-prepucial y, si es
• Incontinencia urinaria: utilización prioritaria mujer, incluir el interior de los labios mayo-
de reeducación vesical, colectores, paña- res y menores.
les. 7. Cambio de guantes y colocación del cam-
• Prostatitis aguda. po estéril.
• Lesiones uretrales (estenosis, fístulas). 8. Comprobación del buen funcionamiento del
• Traumatismos uretrales (doble vía y otros). balón del catéter: inyectar 10 mL de aire y
esperar algunos segundos. A continuación,
retirar el aire.
9. Colocar el paciente en posición de decúbi-
to supino, si es hombre, y en posición
ginecológica, si es mujer.

1366
CAPÍTULO IV: GUÍA DE MANEJO DE SONDAS Y DRENAJES

10.Limpiar con solución antiséptica los de permitir avanzar la sonda más allá
genitales externos y el meato uretral. de los pliegues de la uretra. Si no cede
11.Lubricar la uretra con Xylocaina® o lubri- la resistencia, cambiar el ángulo del
cante urológico, en forma abundante y es- pene hacia abajo a la vez que se intro-
perar unos minutos para que el anestésico duce la sonda con movimientos cortos
haga efecto. En el hombre, se recomienda de rotación hasta conseguir que fluya la
colocar en el meato uretral el cono orina.
aplicador que viene incluido con el tubo de 13.Llenado del balón con agua o SSN, según
Xylocaina® y administrar el lubricante. indicaciones del fabricante, y una vez que
12.Inserción de la sonda: haya flujo de orina.
• En la mujer, limpiar el meato con una 14.Recolección de muestra de orina, si es
gasa seca e introducir la sonda bien lu- necesario.
bricada con suavidad, pidiéndole a la 15.Conexión de la sonda al sistema recolector
paciente que realice inspiraciones pro- (Cystoflo®).
fundas y prolongadas, a la vez que em- 16.Fijación de la sonda: en el hombre, de pre-
puja hacia abajo con los músculos de la ferencia se debe fijar en ángulo de 45° a la
pelvis para facilitar la inserción. Si se cresta iliaca y en la mujer, fijar a la cara
encuentra resistencia, angular ligera- interna del muslo. Sin embargo, la reco-
mente la sonda hacia la sínfisis púbica. mendación general es fijarla de manera que
Si después de introducir de 8 a 10 cm permita el libre movimiento sin que haya
de longitud de la sonda no hay retorno tensión de la sonda.
de orina y la paciente no está deshidra- 17.Registro del procedimiento y sus compli-
tada o no ha tenido una micción recien- caciones en la historia clínica.
te, es probable que la sonda se haya
introducido por error en la vagina, en
cuyo caso, se debe repetir el procedi- PRECAUCIONES
miento previo cambio de guantes y, para
evitar repetir el error, mantener inserta- • Si el cateterismo se realiza porque el pa-
da la primera sonda. ciente presenta retención urinaria, se pro-
• En el paciente hombre, coger el pene cede a pinzar de forma intermitente el tubo
en un ángulo de 90º con respecto al ab- de la bolsa colectora, para evitar hemorra-
domen y retraer completamente el pre- gias por descompresión vesical brusca.
pucio; aplicar una suave tracción hacia • En pacientes con hipertrofia prostática o
arriba para alinear la uretra. Pedirle al postoperados, puede ser difícil la introduc-
paciente que haga esfuerzo para orinar, ción del catéter más allá de la próstata;
lo que relaja los esfínteres y permite una igualmente, hay pacientes que presentan
inserción más suave. Introducir 20 cm estenosis uretrales en algún tracto de la
de longitud de la sonda, aproximada- uretra. En ambos casos la colocación de
mente, hasta alcanzar la vejiga y com- la sonda debe ser efectuada por un urólogo.
probar que sale orina. Si el paso de la • Al finalizar el procedimiento, dejar la piel
sonda ofrece resistencia, aumentar pro- del prepucio recubriendo el glande para evi-
gresivamente la tracción a la vez que tar edemas.
se intenta introducir la sonda, siempre
sin utilizar la fuerza; esta maniobra pue-

1367
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

COMPLICACIONES regular. Según los CDC (Atlanta), aunque


no está totalmente demostrado, no resulta
• Trauma uretral de utilidad el recambio reglado a interva-
• Infección los fijos de las sondas vesicales. Como
medida selectiva, recomienda cambiar la
sonda solo si ésta ha sido violada, y el sis-
MANEJO tema colector externo cambiarlo cada 24
horas especialmente en pacientes con fac-
• Mantener el sistema de drenaje cerrado y tores de riesgo de desarrollar infección.
evitar contaminación por desconexiones
frecuentes.
• Evitar elevar la bolsa recolectora por enci- LECTURAS RECOMENDADAS
ma del nivel de la vejiga del paciente.
• Impedir que la orina se acumule en el tubo 1. Brunner LS, Suddart DS. Manual de Enfermería
manteniendo el flujo libre de la misma, Medicoquirúrgica. Séptima edición. Interameri-
siempre en dirección descendente. cana McGraw-Hill. México, DF, 1994.
2. Catellote MJ, Mateo T. Sondaje Vesical D.U.E. del
• Vigilar torsión o enrollamiento de la sonda.
Hospital Obispo Polanco de Teruel.
• La bolsa para recolección (Cystoflo®) debe www.opolanco.es/apat/boletin12/sondas.htm
ser drenada periódicamente evitando el 3. Departamento de Enfermería. Manual de Proce-
contacto de su extremo distal con recipien- dimientos. Fundación Oftalmológica de Santander
tes o superficies. Clínica Carlos Ardila Lülle. Bucaramanga, 1999.
• Valorar los indicadores de infección urina- 4. Departamento de Enfermería. Manual de Proce-
ria (aumento de la temperatura, escalofríos, dimientos. Instituto Nacional de Cancerología.
dolor suprapúbico, orina turbia o mal olien- Bogotá, 2001.
5. Dougherty SH, Simmons RL. The biology and
te, hematuria).
practice of surgical drains. Part 1. Curr Probl Surg
• Valorar la aparición de infección uretral (se- 1992; 29: 559-623.
creción alrededor de la sonda) y en caso 6. Dougherty SH, Simmons RL. The biology and
de que ésta exista, tomar una muestra para practice of surgical drains. Part 2. Curr Probl Surg
cultivo. 1992; 29: 633-730.
• Cuando haya que pinzar la sonda, hacerlo 7. Fishman NH. Thoracic drainage: a manual of
siempre en el tubo del sistema de drenaje procedures. Mosby Yearbook. St. Louis, 1983.
urinario (Cystoflo®) nunca en la sonda 8. Foxman B. Epidemiology of urinary tract infections:
incidence, morbidity and economic costs. Am J
misma.
Med 2002; 113: 6S- 13S.
• El catéter y el sistema de drenaje deben 9. Ronald A. The etiology of urinary tract infection:
cambiarse de acuerdo con la recomenda- traditional and emerging pathogens. Am J Med
ción del Comité de Infecciones de cada ins- 2002; 113: 14S-19S.
titución. Sin embargo, la recomendación 10. Vanegas S. Sondas y Sistemas de Drenaje. Guía
general es que debe evitarse su cambio de Procedimientos, Departamento de Enfermería.
Fundación Santa Fe de Bogotá. Bogotá, 2001.

1368
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

CAPÍTULO V

Toma de muestras de laboratorio

Sandra Piedad Rivera Castro, Enf.


Clínica Fundación Valle del Lili

INTRODUCCIÓN

U no de los objetivos de la atención en los


servicios de urgencias es diferenciar
aquellos procesos graves que requieren tra-
- Uso de gafas o tapabocas con visera
durante la recolección de muestras con
riesgo de salpicaduras.
tamiento hospitalario inmediato, de otros más - No re-enfundar agujas y desecharlas en
leves que pueden ser estudiados o tratados el recipiente adecuado (Guardián® BD)
en forma ambulatoria. Los especímenes obte- o desechar la aguja y la jeringa en un
nidos en urgencias son usados para el diag- galón destinado para tal fin, evitando la
nóstico y la determinación del tratamiento que manipulación.
allí se va a emprender, o para referir el pacien- • Preservar la técnica aséptica en la obten-
te a otro servicio o a otra institución. ción de muestras mediante procedimien-
tos invasivos (venopunción periférica, ca-
Son el examen físico y una historia clínica téter central, punción lumbar, etc.)
completa los que determinan el número y tipo • Informar al paciente sobre el procedimien-
de las pruebas analíticas que se deben solici- to. Los procedimientos de recolección de
tar. No se justifica el uso de un perfil analítico muestras pueden ser molestos y ocasio-
amplio para el diagnóstico o valoración glo- nar dolor.
bal, sino que los exámenes deben ser orde- • El paciente debe estar en una posición
nados en forma lógica y racional según las cómoda.
condiciones individuales de cada paciente. • Verificar rigurosamente con la orden médi-
Con ello se logra una reducción de los costos ca el nombre del paciente y los exámenes
de la atención médica y se aumenta la eficien- a tomar.
cia y la efectividad del servicio de urgencias. • Verificar el tipo de tubos a utilizar antes de
tomar la muestra. Las técnicas de análisis
varían en cada institución, por lo tanto, es
RECOMENDACIONES GENERALES importante confirmar con el laboratorio el
tipo de tubo, cantidad de muestra y condi-
• Aplicar las normas de bioseguridad para ciones específicas de manejo de las mues-
los trabajadores de la salud: tras.
- Lavado de manos y uso de guantes en • Rotular los frascos y tubos con los datos
todos los casos de manipulación de lí- del paciente antes de tomar la muestra.
quidos corporales. • Enviar la muestra al laboratorio en el me-
nor tiempo posible.

1369
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Llenar los tubos al vacío hasta el nivel • Limpiar la piel con algodón impregnado en
marcado; es imprescindible que estén lle- solución antiséptica, sobre el sitio de la pun-
nos justo hasta la señal. ción, en forma circular del centro a la peri-
• Evitar la yodopovidona, material que pue- feria.
de alterar los resultados de los exámenes, • Puncionar la vena teniendo cuidado en
como elevación de potasio, fósforo, ácido colocar el bisel hacia arriba; una vez se en-
úrico y niveles de bilirrubina. cuentre seguro de estar en la vena, intro-
• En caso de que se tome la muestra de una ducir el tubo de recolección de muestra y
vía ya instalada en el paciente, es fun- soltar el torniquete.
damental realizar una buena purga de la • Retirar la aguja y hacer presión sobre el
misma con el fin de evitar contaminación sitio de punción hasta que deje de salir san-
química. gre (aproximadamente cinco minutos).
• Enviar las muestras al laboratorio.

TÉCNICAS DE RECOLECCIÓN ESPÉCIMEN ARTERIAL


El análisis de los gases arteriales es una prue-
DE ESPECÍMENES ba esencial en el diagnóstico y la monitoría
de los pacientes con enfermedades respira-
ESPÉCIMEN VENOSO torias y en estado crítico. También se toma
Las muestras venosas son comúnmente ob- sangre arterial para determinar niveles de
tenidas por punción directa en el área ante- amonio en pacientes con encefalopatía hepá-
cubital. También se pueden obtener de un tica.
acceso venoso central instaurado en el pa-
ciente. Se recomienda recolectar la muestra La obtención de la muestra de sangre arterial
de una vena independiente de la vena debe ser realizada por personal capacitado.
periférica que se esté utilizando para terapia Existen dos procedimientos para la recolec-
intravenosa mediante técnica cerrada usan- ción de sangre arterial: punción directa de la
do el set Vacutainer®, lo cual mejora la cali- arteria y toma a partir de un catéter arterial ya
dad de la muestra (cantidad apropiada, dis- implantado. El sitio de primera elección para
minución de hemólisis) y disminuye el riesgo la punción es la arteria radial por su fácil acce-
de contaminación. so por palpación; de no ser posible este acce-
so, se opta por la arteria braquial o la arteria
EQUIPO femoral, en cuyo caso, debe hacerlo un
médico.
Guantes, gafas protectoras, torniquete, paños
con alcohol, tubos apropiados para la mues- EQUIPO
tra ordenada, set Vacutainer® o jeringa de 10
mL con aguja, cura adhesiva, pericraneal, Jeringa específica para obtención de gases
microtainer de 0,5 a 10 mL. arteriales preheparinizada o jeringuilla de 1 mL
con aguja 25 Ga lavada con heparina 1.000
PROCEDIMIENTO UI/mL, algodón con alcohol, gasas secas, ta-
pón para la jeringuilla, guantes, gafas protec-
• Seleccionar la vena y aplicar el torniquete toras, recipiente con hielo, pericraneal Nº
a 4 cm por encima del sitio que se va a 20-22 para adultos o 23-25 para niños.
puncionar.

1370
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

PROCEDIMIENTO ESPÉCIMEN CAPILAR


Es un sistema de colección de mayor uso en
• Seleccionar la arteria. niños menores de un año y, en algunas oca-
• Si se ha elegido la arteria radial, realizar la siones en adultos, como en la realización de
prueba de Allen modificada para valorar el glucometría. Se puede puncionar el pulpejo
flujo sanguíneo colateral: mientras el pa- de los dedos de las manos y áreas específi-
ciente mantiene el puño cerrado con firme- cas de los pies.
za, comprimir las arterias radial y ulnar
(cubital) simultáneamente; pedir al paciente EQUIPO
que abra la mano y observar el blanquea-
miento de la palma de la mano y los de- Tubo capilar, lanceta o puncionador, guantes,
dos; liberar la presión sobre la arteria ulnar algodón con alcohol y gasas secas.
(cubital), esperar 15 segundos y observar
el enrojecimiento de la mano. Esto indica PROCEDIMIENTO
que la prueba es positiva y que la arteria
radial puede ser puncionada con seguridad • Seleccionar el sitio a puncionar.
debido a la suficiencia del flujo sanguíneo • Limpiar el área con solución antiséptica.
colateral. • Puncionar el sitio elegido, aplicar presión
• Inmovilizar el miembro que se ha elegido moderada para la obtención de la mues-
para la punción con la muñeca en hiper- tra, usar el capilar o colector.
extensión, apoyada sobre un rollo de tela. • Limpiar y hacer presión con una gasa seca.
• Preparar la piel con gasa impregnada en • Enviar la muestra al laboratorio.
solución antiséptica, y permitir que la solu-
ción actúe por 10 segundos. ESPÉCIMEN URINARIO
• Palpar la arteria, percibir el pulso y la di- La orina es el líquido que excretan los riño-
rección de la arteria e insertar la aguja en nes y que contiene productos de desecho
un ángulo de 30° a 45º con el bisel hacia metabólico y agua. En algunas enfermedades
arriba hasta lograr puncionar la arteria. e intoxicaciones la orina puede proporcionar
• Aspirar suavemente y obtener 2 mL de información clínica importante.
sangre.
• Retirar la aguja, remover las mínimas bur- EQUIPO
bujas de aire que puedan estar contenidas
en la jeringa (si hay aire en cantidad Recipiente para muestra de orina, guantes,
significante, la prueba queda invalidada), gasas.
desechar la aguja y proteger la jeringa con
el tapón de caucho. En lo posible, no en- PROCEDIMIENTO
viar al laboratorio con aguja.
• Hacer presión por no menos de 5 minutos • Entregar al paciente el recipiente para to-
o por el tiempo necesario para impedir san- mar la muestra de orina, rotulado con el
grado. nombre del paciente, el número de la his-
• Enviar la jeringa inmediatamente al labo- toria clínica y la fecha, y darle las instruc-
ratorio bien tapada y en un recipiente con ciones pertinentes para la recolección de
hielo (conservar a 4º C durante el trans- orina.
porte). • Antes de recoger la muestra se debe reali-
zar aseo de los genitales con agua y jabón

1371
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

sin dejar residuos. Esto es especialmente • Colocar el pato en posición cómoda para
importante en la mujer. Evitar la contami- el paciente.
nación de la muestra con cremas, antisép- • Recoger la muestra con un bajalenguas.
ticos y secreciones vaginales. • Si el paciente está en capacidad de reco-
• Desechar la primera parte de la elimina- ger la muestra, darle las instrucciones per-
ción y recoger 10 mL de orina del chorro tinentes.
intermedio. • Si es un paciente que usa pañal, invertir la
• En niños y niñas pequeños, la orina se re- cara del pañal, de tal manera que la mate-
coge en colectores o bolsas estériles es- ria fecal quede contenida en la parte plás-
pecialmente diseñados para ellos. Si no se tica del pañal.
obtiene la muestra, se debe tener la pre-
caución de cambiar la bolsa mínimo cada ESPÉCIMEN MICROBIOLÓGICO
hora por la contaminación de la misma. Se debe diferenciar el tipo de microorganis-
• Cuando esté indicado, recolectar la mues- mo en aerobio y anaerobio para obtener en el
tra de orina con sonda, siguiendo el proto- recipiente adecuado; asimismo, tener en cuen-
colo de cateterismo vesical de cada insti- ta si el paciente recibe tratamiento con anti-
tución. biótico.

ESPÉCIMEN DE FLUIDOS CORPORALES • Gram: la tinción de Gram se realiza para


Los fluidos corporales que se envían más co- diferenciar los microorganismos en Gram
múnmente al laboratorio para ser analizados positivos o Gram negativos. Debido a que
son: líquido pleural, líquido sinovial, líquido el resultado es inmediato, es útil para se-
amniótico, líquido pericárdico, líquido perito- leccionar la terapia antibiótica hasta que
neal, aspirado gástrico y líquido cefalorra- esté disponible el resultado del cultivo y
quídeo. Estos fluidos son obtenidos con téc- antibiograma de la secreción. Se toma la
nica estéril, excepto, el gástrico. La enferme- muestra de la secreción con escobillón y
ra debe asistir al médico durante el procedi- se envía al laboratorio en tubo estéril in-
miento y seguir las recomendaciones gene- mediatamente.
rales para el manejo de las muestras. • Cultivo y antibiograma: las muestras de
secreciones, líquidos corporales y heridas
ESPÉCIMEN DE MATERIA FECAL se cultivan para diagnosticar infección
La muestra debe ser fresca, obtenida en reci- bacteriana e identificar el gérmen causal.
piente estéril y no debe ir contaminada con El antibiograma determina si la cepa
orina. bacteriana es sensible o resistente a de-
terminado antibiótico.
EQUIPO • Esputo: la recolección de muestra de es-
puto en urgencias se realiza para cultivo y
Recipiente para muestra de materia fecal, antibiograma y tinción de Gram de las
pato, bajalenguas, gafas protectoras, guantes secreciones en infecciones respiratorias
y tapabocas. bajas con el fin de definir el tratamiento an-
tibiótico. La muestra se obtiene por méto-
PROCEDIMIENTO do directo (el paciente tose en forma vo-
luntaria), método indirecto (aspiración oro
• Colocación de guantes limpios y o nasotraqueal) y lavado gástrico (diagnós-
tapabocas. tico de tuberculosis). La muestra se reco-

1372
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

ge en frasco limpio con tapa y se envía al ESTABILIDAD DE LAS MUESTRAS


laboratorio rápidamente.
• Hemocultivos: se realiza para la determi- La estabilidad de las muestras obtenidas y en
nación de microorganismos en la sangre tránsito para ser analizadas, representa un reto
utilizando el examen directo y cultivo, y es- importante. Evidentemente, este periodo es
tablecer la susceptibilidad de las bacterias usualmente muy largo, variable, poco atendido,
por medio del antibiograma. Las muestras en tal forma que afecta los especímenes (san-
para hemocultivos deben ser tomadas con gre, orina, líquidos biológicos, etc.), sus carac-
técnica aséptica, antes de iniciar la terapia terísticas fisicoquímicas (evaporación, sedi-
antimicrobiana, evitar la contaminación ex- mentación, precipitación, etc.), la flora bacte-
terna, en dos sitios de venopunción peri- riana presente (aumento o disminución de gér-
férica distintos y de catéter venoso central menes, especialmente de los anaerobios) y la
sólo cuando el infectólogo lo indique o en concentración de sus constituyentes químicos.
caso de acceso venoso periférico difícil.
Equipo: mascarilla con visera o tapabo-
cas y gafas; gorro; blusa estéril; guan- PRUEBAS DE LABORATORIO
tes estériles; gasas estériles; jabón y DE MAYOR USO EN URGENCIAS
solución antiséptica de yodo o clorhexi-
dina; torniquete; esparadrapo; jeringas 1. Pruebas bioquímicas en sangre
de 20 ml (para adultos) y de 3-5 ml (para Determinaciones: amilasa, amoniaco, nitró-
niños) o camisa para toma de muestras geno ureico sanguíneo (BUN, blood urea
al vacío y tres frascos para cultivo (aeró- nitrogen), creatinina, electrolitos séricos, cal-
bico, anaeróbico y resina si el paciente cio, glucosa, proteínas totales y albúmina,
está recibiendo antibióticos). LDH, transaminasas, proteína C reactiva.
Procedimiento: Muestra: la sangre se recoge en tubo seco
- Preparación del equipo: dejar los fras- de 5 a 7 mL mediante sistema de extrac-
cos destapados conservando las tapas ción al vacío y manteniendo el tubo cerrado.
pegadas con esparadrapo y marcados
con los datos del paciente y el número 2. Hemograma (cuadro hemático)
de hemocultivo. Determinaciones: recuento de glóbulos ro-
- Lavado de manos. jos (hematíes), glóbulos blancos (leucoci-
- Colocación de bata y guantes. tos), hematocrito, hemoglobina, fórmula
- Selección del sitio de punción. leucocitaria, recuento de plaquetas y velo-
- Limpieza de la piel. cidad de sedimentación globular.
- Toma de las muestras: extraer 15 mL de Muestra: tubo con anticoagulante (edta) de
sangre (paciente adulto), introducir 10 mL 3 a 5 mL.
en el frasco Nº 1, para anaeróbicos, y los Precauciones: llenar el tubo por extracción
5 mL restantes en el frasco Nº 2, para al vacío hasta el nivel marcado, no abrir el
aeróbicos. Extraer una segunda muestra tubo para llenarlo. Mezclar suavemente, in-
de sangre de 15 mL, intrducir 5 mL en el virtiendo el tubo y evitando la hemólisis.
frasco Nº 2 y los 10 mL restantes en el
frasco Nº 3 (para aeróbicos o con resina 3. Pruebas de coagulación
si el paciente está recibiendo antibióticos). Determinaciones: tiempo de protrombina
En el paciente pediátrico 1-3 mL de sangre (PT), tiempo parcial de tromboplastina
por frasco es una cantidad suficiente. (PTT), fibrinógeno y dímero D.

1373
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Muestra: tubo de 4,5 mL con citrato sódico. 9. Urocultivo


Mezclar suavemente invirtiendo el tubo; la El urocultivo no es un análisis considerado
extracción debe hacerse sin torniquete, si urgente; sin embargo, en determinadas cir-
es posible, o manteniéndolo máximo por cunstancias, a fin de instaurar tratamiento
30 segundos. antibiótico racional, se requiere la recolec-
ción de la muestra antes de iniciar el trata-
4. Bilirrubina total y directa miento.
Muestra: tubo seco de 5 a 7 mL. Muestra: recipiente estéril.
Precauciones: Precauciones: si no se envía inmediata-
· La muestra debe estar protegida de la luz; mente al laboratorio, conservar a 4º C máxi-
la acción de la luz altera los resultados, dis- mo por 24 horas.
minuyendo el verdadero valor.
· Evitar hemólisis durante la extracción, 10. Análisis de líquidos biológicos
puesto que, el resultado eleva el valor. Determinaciones: análisis citoquímico y
bacteriológico de líquido cefalorraquídeo,
5. Hemocultivos
pleural, ascítico, sinovial, peritoneal y am-
Muestra: frasco de hemocultivo para
niótico.
anaerobios y aerobios. Si el paciente se
Muestra: dos tubos secos de 10 mL sin gel
encuentra en tratamiento con antibióticos,
separador
incluir un frasco con resina (frascos
• Precauciones
Bactec®).
- Líquido cefalorraquídeo (LCR)
Precaución: llevar inmediatamente los fras-
- Para el estudio bacteriológico rutinario es
cos al laboratorio; si esto no es posible, hay
suficiente 1 mL; sin embargo, es preferi-
que conservarlos a 37º C.
ble disponer de volúmenes superiores.
6. Monitorización de fármacos - Para hongos o microbacterias se nece-
Determinaciones: ácido valproico, amika- sitan por lo menos 2 mL adicionales por
cina, antidepresivos tricíclicos, carbamace- cada uno de los estudios.
pina, litio, metrotexato, paracetamol, salici- - El producto debe enviarse inmediata-
latos, digoxina, etosuximida, fenitoina, feno- mente al laboratorio, puesto que algunos
barbital, tacrolimus, teofilina, tobramicina, de los agentes etiológicos pueden sufrir
vancomicina. lisis rápidamente a partir de una hora tras
Precauciones: enviar muestra de sangre de su recogida. Nunca se debe refrigerar,
acuerdo con las especificaciones del labo- pues se puede afectar la viabilidad de N.
ratorio. meningitidis y H. influenzae.
• Otros líquidos orgánicos
7. Gasimetría - Para el estudio bacteriológico rutinario
Determinaciones: PaO2, PaCO2, pH, bicar- es suficiente entre 1 y 10 mL; cuando
bonato, base exceso. se requiere la investigación de microbac-
Muestra: jeringuilla de gasometría con terias u hongos, se envía un volumen
heparina. superior a 10 mL, que es la mínima can-
tidad necesaria.
8. Análisis de orina (uroanálisis) - Si es necesario evitar la coagulación de
Determinaciones: anormales y sedimento; estos líquidos, se usa la heparina sin
prueba de gestación. conservantes; otros anticoagulantes
Muestra: frasco con tapa. pueden tener acción bactericida.

1374
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

11. Tóxicos INTERPRETACIÓN DE LOS


Determinaciones: opiáceos, anfetaminas,
cocaína, metadona, fenilciclidina, benzo-
RESULTADOS DE LABORATORIO
diacepinas, barbitúricos, antidepresivos
tricíclicos y alcohol.
Muestra: sangre en tubo seco y orina en En la tabla 1 se presentan los resultados de
frasco con tapa. las pruebas más frecuentes en urgencias y
Precauciones: su utilidad clínica.
- Tomar con técnica cerrada con set Vacu-
tainerâ y conservar el frasco tapado.
- No usar alcohol ni derivados como anti-
séptico en la extracción sanguínea.

TABLA 1. VALORES DE REFERENCIA E INTERPRETACIÓN DEL RESULTADO

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Amilasa Suero 30-110 U/L Es un marcador para enfermedad pancreática aguda.
Orina 32-641 U/L La actividad de la amilasa sérica aumenta en cuestión
de horas (6 a 48 horas) en los pacientes con pancreatitis
aguda; valores por encima de 500 U/l tienen valor diag-
nóstico. La amilasuria se eleva rápidamente, horas des-
pués de elevación en suero, y permanece elevada más
tiempo que en el suero.

Amonio 9-33 mmol/L La causa más frecuente de alteración de amonio es la


enfermedad hepática severa y la enfermedad renal cró-
nica o aguda. Controlar los niveles de amonio en sangre
es de gran utilidad en el tratamiento del coma hepático.

Bilirrubina total y Total: 0,0-1,0 mg/dL Evaluación, clasificación y seguimiento de las ictericias
directa Directa: 0,0-0,3 mg/dL tanto del adulto como neonatales. La hiperbilirrubinemia
Indirecta: 0,0-0,1 mg/dL se clasifica en conjugada y no conjugada. La conjugada
es hepática, colestásica, cirrosis biliar primaria, hepati-
tis, ictericia familiar y la pos hepática por obstrucción
biliar por cálculos, cáncer o malformaciones de la vía
biliar.La hiperbilirrubinemia no conjugada se clasifica en
prehepática (estados hemolíticos y hematomas exten-
sos) y hepática (síndrome de Gilbert y Crigler-Najjar e
ictericia neonatal).

Calcio iónico Suero 1,16-1,32 mmol/L Hay hipercalcemia debida a tumores malignos e
hiperparatirodismo primario y hay hipocalcemia por in-
suficiencia renal, hipoparatiroidismo, deficiencia de vita-
mina D e hiperparatiroidismo secundario.

1375
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Creatin Quinasa Hombres 35-232 U/L La CK MB/CPK ofrece un índice relativo que permite
Total CK-CPCreatin Mujeres 21-215 U/L establecer la ocurrencia o no de infarto agudo del
miocardio (IM). El ejercicio vigoroso como trotar o correr
Quinasa fracción MB 0-6 U/L puede producir elevación de las isoenzimas a niveles
similarea a los del IM.

Cloro Suero Se presenta hipocloremia por pérdida de cloro en trastor-


98-107 mEq/L nos gastrointestinales, cetoacidosis diabética, exceso de
mineralocorticoides y enfermedades renales; en trata-
miento con ácido etacrínico, ACTH, corticoesteroides,
diuréticos mercuriales y furosemida.Se presenta hiper-
cloremia en acidosis metabólica por pérdida de bicarbo-
nato, en hiperalimentación de sales de cloruro de amonio.

Coproscópico pH Útil para el diagnóstico de infestación parasitaria, icteri-


Sangre oculta cia obstructiva, diarrea, malabsorción, obstrucción
Leucocitos (células segmentadas): rectosigmoidea, disentería, colitis ulcerativa y hemorra-
neutrófilos, linfocitos, eosinófilos. gia gastrointestinal.
Azúcares reductores
Glucosa
Sacarosa
Grasas
Hongos
Parásitos (trofozoitos)
Flora bacteriana

Creatinina Suero La determinación de creatinina sérica se utiliza princi-


< 12 años 0,25-0,8 mg/dL palmente para evaluar la función renal, se eleva en daño
Hombres 0,8-1,5 mg/dL renal en necrosis musculoesquelética, trauma, distrofia
Mujeres 0,7-1,2 mg/dL muscular progresiva, esclerosis lateral amiotrófica,
amiotonía congénita, dermatomiositis, miastenia gravis,
ayuno prolongado, hipertiroididmo y acidosis diabética.

Cuadro hemático Leucocitos 7,8 ± 3 (10*3 / mm3) Su mayor utilidad está en el diagnóstico diferencial de
completo Eritrocitos 4,4-7,0 (10*6/ mm3) las anemias, en la evaluación y caracterización de lesio-
Hemoglobina 12,0-17,0 g/dL nes proliferativas del sistema hematopoyético y en la
Hematocrito 36-51% evaluación de procesos infecciosos.El recuento
VCM 80-98 mm3 plaquetario se determina en pacientes con sospecha de
HbCM 29 ± 2 pg enfermedad hemorrágica, púrpura o petequias, prolon-
CHbCM 32-35 g/dL gación del tiempo de sangría, leucemia, linfoma, quimio-
Plaquetas 150-400 (10* 3 / mm3) terapia, y para determinar la respuesta de los pacientes
Eritrosedimentación: que están recibiendo transfusiones de plaquetas.
hombres 0-10 mm/hora.
Mujeres 0-20 mm/hora.

VCM: Volumen corpuscular media


HbCM: Hemoglobina corpuscular media
CHbCM: Concentración de hemoglobina corpuscular media

1376
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Cultivo y antibiograma Cultivo negativo para determinado Aislamiento, identificación y antibiograma en los diferen-
bacteriológico germen patógeno tes tipo de bacterias patógenas que están involucradas
en infecciones humanas.

Deshidrogenasa 313-618 U/L La LDH se mide principalmente para diagnosticar condi-


láctica (LDH) ciones en las cuales hay daño tisular.

Dímero D Negativo Indicador de actividad del sistema fibrinolítico en casos


de coagulación intravascular diseminada. Tamizaje de
pacientes con sospecha de trombosis venosa profunda
o tromboembolismo pulmonar. También se eleva en he-
morragias, hematomas y en terapia trombolítica. Se pre-
sentan falsos positivos por factor reumatoideo o emba-
razo.

Fibrinógeno (Factor I) 200-400 mg/dL Sirve para determinar deficiencias congénitas o adquiri-
das de fibrinógenos y controlar severidad y tratamiento
de la coagulación intravascular diseminada y de fenó-
menos de fibrinólisis.Se encuentra en niveles elevados
en enfermedades inflamatorias agudas y crónicas, sín-
drome nefrótico, glomerulonefritis crónica, hipernefrona,
hepatitis, hepatoma, cirrosis, embarazo, coagulación
intravascular compensada y en terapia con estrógenos.

Fosfatasa alcalina 50-136 U/L Se eleva en colestasis intra o extrahepática (hepatitis,


(FAL) Niños 60-270 U/L cirrosis biliar, drogas hepatotóxicas, colédocolitiasis,
carcinoma de la cabeza del páncreas, carcinoma hepá-
tico), en enfermdades óseas como osteitis, raquitismo,
osteomalacia, fracturas en consolidación, tumores
osteoblásticos e hiperparatiroidismo. También puede ele-
varse en Insuficiencia cardiaca, mononucleosis infeccio-
sa, IM, perforación de intestino y septicemia.

Gama Glutamil Hombres 15-85 U/L Enzima microsomal que se encuentra principalmente en
Transferasa (gGT) Mujeres 5-55 U/L hígado, páncreas y riñón. Está indicada en la evalua-
ción de enfermedad hepática colestásica y lesión hepá-
tica inducida por abuso de drogas y alcohol. Se eleva
junto con la FAL en enfermedades pancreáticas y hepá-
ticas.

Glucosa Ayunas:75-110 mg/dL La determinación en ayunas y la prueba de tolerancia a


2 horas pos carga: < 140 mg/dL una carga de glucosa sirven para establecer el diagnós-
orina: < 30 mg/dL tico de Diabetes Mellitus y los trastornos de los
LCR: 40-70 mg/dL carbohidratos. También sirve para controlar el tratamiento
en los diabéticos y los pacientes con deshidratación,
coma, hipoglicemia, insulinoma, acidosis y cetoacidosis.

IM: Infarto de miocardio


FAL: Fosfatasa alcalina

1377
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Lipasa 23-300 U/L La lipasa sérica se eleva rápidamente en pacientes con
lesiones en páncreas como pancreatitis aguda y recurren-
te, absceso o seudoquiste, trauma y carcinoma; también
se eleva en obstrucción del colédoco, peritonitis, infarto y
obstrucción intestinal, abscesos abdominales, falla renal
y por acción de algunos fármacos como anticolinérgicos y
opiáceos.
Magnesio Suero: 1,3-1,9 mEq/L Evaluación de alteraciones por malabsorción, pancreatitis,
desórdenes de la depuración renal y control del tratamiento
de la toxemia del embarazo. La hipomagnesemia se aso-
cia con hipocalcemia, alcoholismo crónico, malnutrición,
malabsorción, hemodiálisis crónica, drenaje gástrico pro-
longado, pancreatitis aguda, hipoparatiroidismo,
glomérulonefritis hiperaldosteronismo y embarazo. La
hipermagnesemia se presenta en pacientes con falla re-
nal, deshidratación y enfermedad de Addison.

Nitrógeno Uréico Suero El BUN generalmente no se aumenta significativamente


(BUN) Hombres 9-20 mg/dL sino hasta que la filtración glomerular no se disminuye por
Mujeres 7-17 mg/dL lo menos en un 50%, por lo tanto no es un indicador pre-
coz de daño renal.

Proteínas totales y Totales: 6,3-8,2 g/dL La concentración de proteínas séricas refleja principalmen-
relación A/G Albúmina: 3,5-5,0 g/dL te la disminución de la síntesis hepática o la pérdida
Globulinas: 2,8-3,2 g/dL protéica por el riñón. La elevación de proteínas totales se
encuentra en deshidratación, mielomamultiple, hiper-
globulinemia, enfermedades granulomatosas, del colágeno
y ciertas enfermedades tropicales. Hay disminución por
dieta baja en proteínas, desnutrición, malabsorción, en-
fermedad hepática severa, quemaduras extensas, alco-
holismo crónico, falla cardiaca, neoplasias, sobrehidrata-
ción, enfermedad renal.
Potasio Suero Útil para detectar estados metabólicos donde se presen-
3,6-5,0 mEq/L tan variaciones en la concentración de potasio sérico y/o
urinario tales como desbalance hidroelectrolítico, arritmias,
debilidad muscular, encefalopatía hepática, falla renal. Hay
medicamentos que elevan fisiológucamente el potasio ta-
les como amiloride, captopril, ciclosporina, danasol, enala-
pril, epinefrina, heparina, histamina, nifedipina, espirinolac-
tona y terbutalina. Se presenta disminución por diuréti-
cos, anfotericina, cisplatino, corticoesteroides, insulina,
teofilina, penicilina sódica y bicarbonato de sodio.
Proteína C reactiva Menor de 1,0 mg/dL La PCR es la más sensible de fase aguda. Se eleva dos
(PCR) horas después de una lesión aguda, hace pico y empieza
a disminuir a las 48 horas. Es un indicador de procesos
inflamatorios mas sensible que la sedimentación globular
y el leucograma.

1378
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Sodio Suero o plasma: 140-148 mEq/L Se eleva en desequilibrio ácido-básico en pacientes
descompensados hemodinámicamente.

Transaminasa ALT 30-65 U/L Se elevan significativamente en hepatitis y necrosis he-


Glutámicopirúvica AST 15-37 U/L pática de diferente etiología y en menor nivel en cirrosis,
GPT (ALT) ictericia obstructiva, carcinoma metastásico, congestión
Transaminasa hepática y colestasis intrahepática. Puede haber eleva-
Glutámico oxalacética ción ligera en IAM y pancreatitis aguda, aunque la eleva-
GOT ( AST) ción de la AST en el IAM es más significativa.

Tiempo de Protombina PT 12,8-15,8 segundos El PT evalúa trastornos de la coagulación que comprome-


(PT) e INR (Radio INR2,0-3,0 para una dosis estándar de ten el sistema extrínseco y la vía común de la coagula-
Internacional cumarínicos. ción. También se prolonga durante el tratamiento a largo
Normalizado) 2,5-3,5 para una dosis alta de plazo con heparina, deficiencia de vitamina K, enferme-
cumarínicos. dad hepática, hipofibronogenia y coagulación intravascular
diseminada (CID). Su mayor utilidad radica en el control
de la anticoagulación oral con cumarínicos.

Tiempo Parcial de Prueba sensible a todos los factores que intervienen en el


Tromboplastina (PTT) sistema intrínseco de la coagulación, especialmente a defi-
ciencias funcionales de factor VIII, IX, XI y XII. Es de utili-
dad para controlar la efectividad de la terapia con heparina.

Troponina 0,0-1,0 ng/mL El IM agudo se diagnostica generalmente por dolor


I cuantitativa precordial, cambios electrocardiográficos y elevación de
las enzimas cardiacas. En las últimas dos décadas la más
usada ha sido la izoenzima MB, sin embargo, su especifi-
cidad no es tan buena como la de TnI puesto que la CK-
MB también se eleva en enfermedad aguda y crónica.

Uroanálisis Aspecto El uroanálisis es de ayuda en el diagnóstico, evolución y


Color : amarillo transparente tratamiento de infección urinaria y enfermedades renales.
pH: 5-7
Densidad: 1001-1030
Proteína, bilirrubina, cetonas, nitritos,
sangre y glucosa negativos.
Urobilinógeno: 0,2-1,0 U Erlich/dL
Leucocitos: 1-2 por campo
Células epiteliales: escasas por campo
Cilindros hialinos: ocasionales por
campo
Bacterias: raras
Eritrocitos: 0,2 por campoCristales:
ocasionales (fosfatos)
Moco

Opiáceos, anfetami- Negativo Detección de drogas de abuso.


nas y cocaína.

1379
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Benzodiacepinas Negativo < 12 ng/dL Prueba de tamizaje o presuntiva para detectar presencia
de benzodiacepinas y sus metabolitos en suero.

Barbitúricos Negativo < 60 ng/mL Prueba de tamizaje o presuntiva para detectar presencia
de barbitúricos y sus metabolitos en orina; su presencia
indica uso durante tres días previos a la determinación.

Antidepresivos Rangos terapéuticos (ug/l): Seguimiento del tratamiento para evitar niveles tóxicos y
tricíclicos Amitriptilina 120-250 en los casos donde se sospeche su ingestión como inten-
Nortriptilina 50-150 to de suicidio.
Desipramina 75-160
Inipramina 150-250

Alcohol etílico (etanol) Negativo < 10 mg/dL Determina la concentración de alcohol etílico en sangre
para hacer la correlación con el grado de intoxicación o
con ingestión reciente.

Alcohol metílico Negativo Por ser un método cualitativo no es posible determinar el


(metanol) grado de intoxicación y para esto es necesario la evalua-
ción clínica del paciente. Este tipo de intoxicación es una
verdadera urgencia toxicológica por lo tanto el resultado
debe ser informado rápidamente.

Ácido valproico Rango terapéutico: 50-100 ug/mL Seguimiento del tratameinto debido a grandes diferencias
individuales en las dosis requeridas para alcanzar la tera-
pia efectiva y con el fin de evitar efectos tóxicos de la dro-
ga por sobredosis.

Amikacina Pico 20-25 ug/mg Controlar los niveles sanguíneos del antibiótico para efi-
Valle < 5 ug/mg ciencia del tratamiento y evitar toxicidad.

Carbamazepina 4-10 ug/mg Control de los niveles terapéuticos.

Litio Rango terapéutico: 0,6-1,2 mmol/L Control de los niveles terapéuticos y para evitar toxicidad
Rango potencialmente tóxico: por sobredosis.
>1,5 mmol/L
Toxicidad severa: > 2,5 mmol/L
Metotrexate No ha sido definido un rango terapéuti- Las drogas a dosis altas se utiliza para el tratamiento del
co habitual. La concentración citotóxica cáncer y en dosis bajas para enfermedades reumáticas,
mínina es aproximadamente 0,01 mmol/ psoriasis severa, polimiositis y síndrome de Reiter. En los
L y la concentración potencialmente tóxi- tratamientos con dosis altas se debe determinar los nive-
ca es > 5 mmol/L 24 horas después de les sanguíneos para evitar los efectos tóxicos y garantizar
la terapia con altas dosis. una dosis adecuada.

Salicilatos Rango terapéutico Se recomienda la determinación de los niveles en casos


20-30 mg/dL de sobredosis o en pacientes con artritis reumatoidea en
quienes se deben mantener niveles terapéuticos entre 15
y 30 mg/dL.

1380
CAPÍTULO V: TOMA DE MUESTRAS DE LABORATORIO

PRUEBA VALOR DE REFERENCIA INTERPRETACIÓN CLÍNICA


Digoxina Rango terapéutico: 0,8-2,0 ng/mL Determinar niveles terapéuticos y evitar toxicidad por ex-
ceso del medicamento; rangos por encima de 2,7 mg/mL
deben ser de alerta para disminuir la dosis.

Fenitoína Rango terapéutico: Determinación de niveles terapéuticos.


Niños >3 meses y adultos:
10-20 ug/mL
Niños <03 meses: 6-14 ug/mL
Fenitoína libre: 1-2 ug/mL

Fenobarbital Rango terapéutico: 15-30 ug/mL Determinación de niveles terapéuticos.

Tacrolimus (FK-506) Rango terapéutico: 5-20 ng/mL Tratamiento y control del rechazo pos trasplante de
órganos.

Vancomicina Rango terapéutico: Determinación de niveles terapéuticos.


Pico 30-40 mg/mL Valle 5-10 mg/mL

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Budassi S. Laboratory Specimens. In: Emergency


Nursing. Principles and Practice. Mosby Yearbook.
St. Louis, 1992.
2. Campuzano-Maya G. El hemograma. Medicina &
Laboratorio. 1998; 8:19-32.
3. Cuervo P, Rico C. Guía para la toma de hemocul-
tivos. Actual Enferm 2001; 4:33-36.
4. De Pedro J, Llobera J, Bennassar M, et al. Efica-
cia de dos métodos de compresión en la apari-
ción de hematomas postextracciones sanguíneas.
Enfermería Clínica 2002; 12:1-5.
5. De Merino N. Manual de Procedimientos. Depar-
tamento de Patología y Laboratorio Clínico. Ter-
cera edición. Fundación Santa Fe de Bogotá. Bo-
gotá, 2001.
6. Tucker S, Canobbio M. Diagnósticos básicos de
enfermería, necesidades especiales y equipa-
miento. En: Normas de Cuidados del Paciente.
Harcourt Oceano. Barcelona, 2002.
7. Wilson S, Thompson J. Trastornos respiratorios.
Ediciones Doyma y Times Mirror. Barcelona, 1993.

1381
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VI

Manejo de heridas traumáticas

Sandra María Del Pilar Torres, Enf. Terapista Enterostomal


Jefe de la Clínica de Heridas, Fundación Santa Fe de Bogotá.

M uchas lesiones superficiales se catalo-


gan como de baja prioridad en la admi-
sión al servicio de urgencias, lo cual se tradu-
cede con la evaluación de los traumatismos
superficiales.

ce en mínima atención por parte de los profe- Historia de la enfermedad actual: se enfoca
sionales de la salud y, en algunas ocasiones, hacia la etiología y mecanismo de lesión, el
el paciente egresa sin haber recibido un ma- tiempo transcurrido desde la lesión, las estruc-
nejo adecuado de sus heridas. turas anatómicas afectadas, las característi-
cas de la hemorragia y del dolor, la sensación
El objetivo principal de esta guía es unificar de entumecimiento u hormigueo en la zona
criterios para el manejo de las heridas trau- inmediata o en otras partes del cuerpo.
máticas en urgencias. Los avances en el ma-
nejo de heridas registran nuevas e importan- Antecedentes médicos: diabetes, estado nutri-
tes técnicas y tecnologías. cional, estado circulatorio general y en las
extremidades, antecedentes farmacológicos
(vacunación, anticoagulantes, esteroides,
TRAUMATISMOS SUPERFICIALES inmunosupresores y alergias), manchas en la
piel antiguas y recientes y cicatrices.
Se refiere a trauma cerrado o penetrante que
resulta de caídas, accidentes automovilísticos, Exploración física: edad, valoración general
violencia, mordedura de mamíferos y deportes. del paciente: nivel de conciencia, signos vita-
les, etapa del crecimiento-desarrollo y proble-
Los traumatismos superficiales pueden estar mas o enfermedades concurrentes.
asociados con lesiones potencialmente mor-
tales, en cuyo caso es prioridad la evaluación • Inspección: coloración de la piel: palidez,
y manejo de la vía aérea, la respiración y la cianosis, pigmentación.
circulación. • Localización de la herida, estado de las es-
tructuras adyacentes y subyacentes, edema
de tejidos circundantes y efecto sobre la fun-
EVALUACIÓN CLÍNICA ción de la parte afectada (daño de los vasos
sanguíneos, flujo arterial y venoso, drenaje
La prioridad es detectar las lesiones que ame- linfático, daño nervioso, tendinoso y óseo).
nazan la vida del paciente siguiendo el ABC • Magnitud de la contaminación de la heri-
de la reanimación (ATLS, American College da, presencia de tejido necrótico, presen-
of Surgeons) y, una vez estabilizado, se pro- cia de cuerpos extraños.

1382
CAPÍTULO VI: MANEJO DE HERIDAS TRAUMÁTICAS

• Palpación realiza desbridamiento y extracción de


- Osteo-tendinoso: zonas de hipersensi- cuerpos extraños, y la mayor parte de ellas
bilidad, deformidad ósea, valoración de no deben ser suturadas. Cuando hay sos-
las articulaciones afectadas en toda la pecha de fascitis necrotizante se debe de
amplitud del movimiento. inmediato proceder con la biopsia conge-
- Circulación: valoración de pulsos dista- lación confirmatoria, y si ésta es positiva
les y llenado capilar. emprender la desbridación radical (ver la
- Sensibilidad: identificación de la ausen- guía Infecciones Necrotizantes en esta
cia o la deficiencia de sensibilidad. misma serie)
- Temperatura de la zona afectada. • No urgentes: laceraciones, abrasiones,
contusiones simples, heridas pequeñas por
punción.
Estudios diagnósticos: en general no se re-
quieren estudios diagnósticos en un trauma-
tismo superficial. Sin embargo, en casos de ATENCIÓN DE ENFERMERÍA
heridas infectadas se deben ordenar cultivo y
antibiograma de la herida y hemograma con El manejo de enfermería en urgencias está
fórmula leucocitaria. En casos de coagulopa- orientado a identificar el problema principal en
tías o de hemorragia profusa, se solicita re- el paciente afectado, que en ocasiones es más
cuento de plaquetas, tiempo de protrombina grave por una enfermedad concomitante y a
(PT), grupo sanguíneo y pruebas cruzadas realizar las intervenciones apropiadas en una
para transfusión y hematocritos seriados para secuencia sistemática:
monitorizar la pérdida sanguínea.
1. Déficit del volumen circulatorio relaciona-
Los estudios radiológicos se emplean para do con hemorragia o pérdidas importantes
descartar fracturas y son de especial valor de líquidos.
para la identificación de cuerpos extraños y
gas en los tejidos. Los objetos orgánicos como Intervenciones:
semillas, granos o madera no son radiopacos; - Reposición de líquidos: catéter endove-
el vidrio sí lo es. La presencia de gas en los noso de grueso calibre (14-16) para in-
tejidos subcutáneos generalmente es indica- fusión de cristaloides y, posteriormente,
tiva de una infección por los microorganismos transfusión de concentrado de glóbulos
Gram negativos presentes en una fascitis rojos o de sangre total.
necrotizante polimicrobiana. - Acción sobre la herida, si ésta es fuente
de pérdidas importantes.

CLASIFICACIÓN DE LAS HERIDAS 2. Dolor relacionado con el trauma, irrigación


de la herida y tratamiento específico.
• Gran urgencia: trauma que amenaza la
vida o una extremidad (hemorragia arterial Intervenciones:
incontrolada, lesiones con hipovolemia aso- - Inmovilización con férula o cabestrillo.
ciada, lesiones con compromiso neuro- - Hielo local en bolsa y elevación de la
vascular). extremidad lesionada.
• Urgencia: lesiones que requieren cierre - Administración de analgésicos por pres-
con sutura; en las heridas infectadas se cripción médica.

1383
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

- Administración de analgesia conscien- 7. Deterioro potencial de la movilidad, rela-


te para la realización de los procedimien- cionada con la gravedad y la localización
tos y tratamiento de la lesión, según la del traumatismo.
prescripción médica. Intervenciones:
- Inmovilización con férula del área lesio-
3. Alteración de la perfusión tisular, relacio- nada.
nada con lesión vascular de la extremidad. - Evaluación del estado neuromuscular
(edema, síndrome compartimental, etc.).
Intervenciones: - Elevación de la extremidad.
- Reposición de la volemia.
- Administración de oxígeno en condicio-
nes indicadas. LIMPIEZA E IRRIGACIÓN
- Monitoría neurovascular (pulsos, llena-
do capilar, sensibilidad, motricidad).
DE LAS HERIDAS
- Inmovilización funcional de la extremidad.
La limpieza adecuada de una herida constitu-
4. Deterioro de la integridad de la piel rela- ye la mejor profilaxis de la infección.
cionado con el traumatismo superficial.
Intervenciones: TÉCNICA SEGÚN INDICACIONES
- Preparar el cierre de la herida con sutu-
ras, grapas o cintas adhesivas. • Irrigar con solución salina normal las áreas
cruentas y de disrupción de la integridad
5. Infección, relacionada con contaminación cutánea.
de las heridas o problemas preexistentes • Limpiar la piel antes de realizar suturas, in-
(diabetes, enfermedad vascular periférica, cisiones y drenajes, procedimientos cruen-
abuso de alcohol). tos y extracción de cuerpos extraños.
• Prevenir la infección a fin de lograr la me-
Intervenciones: jor cicatrización para óptimos aspecto y
- Limpieza e irrigación de la herida. función.
- Oclusión de la herida.
- Profilaxis para tétanos, según la guía
Tétanos de esta misma serie. PRECAUCIONES
- Administración de antibióticos según
prescripción médica. • Párpados: descartar trauma ocular y com-
- Instrucción al paciente y la familia so- probar la agudeza visual; la sutura de
bre cuidados de la herida. laceraciones del párpado requiere consul-
ta con cirugía plástica.
6. Ansiedad relacionada con el evento • Cuello: las heridas pueden parecer super-
precipitante del traumatismo, dolor y poten- ficiales; sin embargo, puede existir una le-
cial de desfiguración. sión penetrante que comprometa la vía res-
Intervenciones: piratoria.
- Apoyo emocional y explicación de todos • Lesiones por arma de fuego: puede haber
los procedimientos que se vayan a rea- destrucción extensa del tejido a pesar del
lizar. aspecto benigno del orificio de entrada. La
- Control efectivo del dolor. exploración quirúrgica es inminente por la

1384
CAPÍTULO VI: MANEJO DE HERIDAS TRAUMÁTICAS

presencia de sustancias químicas inyecta- nación bacteriana. Por el contrario, si la pre-


das o cuerpos extraños incrustados. sión es baja la suciedad puede permane-
• Cuero cabelludo: las laceraciones pueden cer y es efectiva sólo para partículas gran-
pasar desapercibidas por gran cantidad de des. Generalmente se utilizan jeringas de
cabello, y el decúbito supino puede ocultar 30 mL o de 50 mL.
fracturas de cráneo. La pérdida importante • El líquido de elección es la solución salina
de sangre es debida a la gran vasculariza- normal (SSN) tibia a 37º C para evitar el
ción del cuero cabelludo. enfriamiento del tejido y mantener la tem-
• Lesiones por aplastamiento o avulsión: las peratura corporal.
heridas con lesión hística extensa o la pér- • La limpieza con gasa de alta porosidad
dida de tejido conllevan mayor riesgo de aumenta el daño del tejido y la tasa de in-
infección y retraso de la cicatrización. fección, por lo cual se recomienda solo la
• Faciales: requieren un manejo especial- irrigación.
mente meticuloso, con la colaboración de • La infección es mayor en heridas irrigadas
cirugía plástica, para lograr resultados es- a alta presión debido a la contaminación
téticos óptimos. cruzada por salpicadura; este riesgo se re-
• Mano: el deterioro funcional de la mano, duce cubriendo con una mano enguantada
especialmente de la dominante, puede cau- los alrededores de la herida o usando un
sar grave discapacidad permanente. campo estéril.
• Fracturas asociadas: las fracturas abiertas
tienen un mayor riesgo de infección y re-
quieren manejo por el especialista. AGENTES LIMPIADORES
• Heridas punzantes: objetos oxidados o su-
cios requieren un mayor cuidado en su
manejo; si la punción fue a través de las En la tabla 1 se presentan las sustancias anti-
ropas o del calzado, debe investigarse la sépticas disponibles en nuestro medio.
introducción de un cuerpo extraño.
• Mordeduras: evaluar el riesgo de rabia.
INCISIÓN Y DRENAJE
RECOMENDACIONES GENERALES
CONTRAINDICACIONES Y PRECAUCIONES
• La humedad excesiva macera la piel. De-
jar empapadas las heridas en solución sa- • Los pacientes con mala higiene, desnutri-
lina o yodopovidona no ha demostrado be- ción, diabetes e inmunodeficiencias,
neficio. Se recomienda el uso de gasa im- requieren técnicas y seguimiento muy cui-
pregnada en vaselina, con o sin antibiótico dadosos.
(Bactigras®, Adaptic®, gasa furacinada), • Los pacientes con trastornos hemorrágicos
la cual evita el desecamiento y trauma de deben ser remitidos a un cirujano.
la herida al retirarla. • Los abscesos profundos, anatómicamente
• La yodopovidona provoca destrucción ce- complejos, y los de cara, manos y pies
lular. deben ser remitidos al especialista.
• La irrigación excesiva o potente puede da- • El procedimiento de drenaje debe ser rea-
ñar el tejido sano y profundizar la contami- lizado por un médico.

1385
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. SOLUCIONES ANTISÉPTICAS

AGENTE ACTIVIDAD MECANISMO INDICACIONES Y


ANTIMICROBIANA DE ACCIÓN CONTRAINDICACIONES
Peróxido de Al 3% germicida débil; Agente oxidante que Se puede usar en piel intacta; no
hidrógeno. Agua ineficaz contra anaerobios. desnaturaliza las proteínas. debe utilizarse en heridas abiertas
oxigenada® por su toxicidad.

Solución de Antimicrobiano de amplio Potente germicida a Al 10% es efectiva para preparar


yodopovidona. espectro, de comienzo concentraciones bajas. la piel.
Isodine® solución rápido.

Jabón de Igual que la solución. Igual que la solución. Nunca usar en heridas, excepto,
yodopovidona. en el lavado inicial.Ideal para
Isodine® espuma lavado de manos.Toxicidad
sistémica en concentración alta.

Clorhexidina Más alto nivel de actividad Bacterias Gram positivas. Su actividad antimicrobiana se
residual y persistencia. reduce en presencia de material
orgánico.

PREPARACIÓN DEL PACIENTE

• Cubrir la zona con campos estériles. 5. Introducción, sin presión, de una gasa es-
• Sujetar el pelo o rasurar la zona de vecin- téril dentro de la herida a manera de “me-
dad, pero nunca las cejas. cha”; de esta manera, se mantiene la heri-
• Limpiar la zona con una solución antisépti- da abierta y permite el drenaje.
ca, realizando movimientos circulares de 6. Aplicación de un apósito estéril y fijación
restregado, desde la periferie hacia el abs- con esparadrapo.
ceso. 7. El apósito se deja durante 24 horas, excep-
• Asistir al médico en la infiltración del anes- to cuando hay drenaje excesivo, en cuyo
tésico local. caso, se debe cambiar según necesidad.
8. Programación de citas para seguimiento y
manejo.
PROCEDIMIENTO

1. Se realiza una incisión con bisturí sobre el SUTURAS CUTÁNEAS ADHESIVAS


absceso y se drena el material purulento.
2. Se liberan adherencias internas con una También se conocen como suturas adhesivas,
pinza hemostática. adhesivos cutáneos, suturas de mariposa,
3. Recolección de muestras del drenaje para adheshivo tisular (Steri-strips®, Curi-strips®,
cultivo de anaerobios y aerobios. Nichi-strips®, Cicagraf®, Suture strips®,
4. Limpieza de la cavidad con gasa estéril e Dermabond®).
irrigación con abundante SSN.

1386
CAPÍTULO VI: MANEJO DE HERIDAS TRAUMÁTICAS

INDICACIONES PREPARACIÓN DEL PACIENTE


Limpieza e irrigación de la herida.
• Estimular la reparación incruenta de la he-
rida. Las laceraciones rectas y superficia- Procedimiento
les con poca tensión son las heridas idea- 1. Realizar hemostasia mediante presión di-
les para el uso de estos materiales. recta.
• Proporcionar un apoyo adicional a las he- 2. Secar la piel; las suturas adhesivas no se
ridas cerradas con suturas o con grapas. adhieren a la piel húmeda.
• Proporcionar estabilidad a la herida y fa- 3. Cortar las suturas adhesivas a la longitud
vorecer su cicatrización tras el retiro de las deseada; la sutura adhesiva debe sobre-
suturas. salir 2-3 cm a cada lado de la herida. Se
• Aproximar los bordes de la piel holgada- retira el extremo de la lengüeta de papel
mente en una herida demasiado antigua que sostiene las tiras adhesivas y se des-
para suturarla, dejando todavía un defecto pega con una pinza; evitar doblar la tira
amplio. adhesiva al sacarla.
• Mantener en su sitio los colgajos y los in- 4. Heridas recientes:
jertos cutáneos. - Se coloca la primera tira adhesiva en el
• Aproximar las heridas en la piel compro- punto medio de la longitud total de la
metida por el uso crónico de corticoides o herida y solamente en un lado de la piel;
por una vasculopatía periférica. se aproximan los bordes de la herida y
se pega la segunda porción de la tira en
el otro lado de la piel. Se desliza un dedo
CONTRAINDICACIONES Y PRECAUCIONES
por encima de la tira para fijar el adhe-
sivo.
• Heridas con gran tensión cutánea, como
- Se colocan otras tiras adhesivas entre
las situadas sobre articulaciones grandes.
la tira medial y los extremos de la heri-
• Heridas que se humedecen por problemas
da hasta que la herida esté suficiente-
de hemostasia, transpiración, exudado o
mente cerrada, pero no “apretada”.
aplicación de ungüentos.
- Se colocan tiras de apoyo perpendicu-
• Heridas infectadas.
larmente a las tiras de aproximación, a
• Heridas rodeadas de pelo o abrasión cutá-
unos 2,5 cm de la herida, lo cual se co-
nea.
noce como técnica de escalera. Las ti-
• Heridas irregulares o sobre áreas cónca-
ras de apoyo impiden que las tiras de
vas.
aproximación se enrollen, y también re-
• Las suturas adhesivas se colocan en for-
ducen la tensión de la piel en los extre-
ma semicircular o en espiral en los dedos;
mos de las mismas.
no se deben colocar en forma circunferen-
- Si es preciso recolocar una de las tiras
cial.
después de aplicada, ésta debe ser re-
• La sutura adhesiva no se debe estirar al
tirada despegando desde ambos extre-
aplicarla; se coloca con poca tensión para
mos hacia la herida.
aproximar los bordes de la herida.
5. Herida cicatrizante (luego del retiro de sutu-
ras): se retiran algunos puntos de sutura
en el tiempo predeterminado y se reempla-
zan con tiras adhesivas.

1387
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CUBRIMIENTO DE LAS HERIDAS LACERACIÓN

El cubrimiento o revestimiento de las heridas Es una herida abierta producida por un des-
provee un microambiente favorable, tempe- garro o una incisión cortante. Se extiende has-
ratura constante, control de los niveles de ta el tejido epitelial profundo y puede afectar
exudado, favorece el intercambio gaseoso y alguna de las estructuras subyacentes; varía
actúa protegiendo la herida de patógenos y en longitud y profundidad. Puede haber san-
problemas adversos particulares, todo lo cual grado local hasta 6 horas después de la le-
significa una óptima condición para la cicatri- sión, hasta la formación de plaquetas y el
zación. La escogencia del apósito depende vasoespasmo. El crecimiento de las células
de la profundidad, clase de tejido y cantidad epiteliales en la superficie de la laceración
de exudado de la herida. (epitelización) se produce hacia las 48 horas
de la lesión, impermeabilizando la mayor par-
• Apósitos especializados: entran en contac- te de las laceraciones. La actividad de los
to con la herida e intervienen en el proce- fibroblastos no alcanza su máximo hasta cer-
so de cicatrización: hidrocoloides como ca de una semana luego de la lesión; si ha
Tegasorb®, Duoderm®; hidropolímeros sido necesario colocar sutura, se recomienda
como Tielle®; hidrogeles como Duoderm® el empleo de esparadrapo para reforzar los
gel, Intrasyte® gel; alginatos como bordes, una vez retirada la sutura.
Tegagen®; y colágeno como Fibracol®. Los
apósitos especializados no se utilizan en
el tratamiento inicial, sino en el manejo ul- EXPLORACIÓN FÍSICA
terior de la herida.
• Apósitos externos: en el mercado está dis- • Hemorragia: depende de la profundidad,
ponible el apósito adhesivo de poliuretano, localización y daño de las estructuras afec-
que es estéril, transparente, impermeable, tadas; si la hemorragia es continua y acti-
evita la contaminación secundaria y prote- va, de sangre roja, se debe sospechar le-
ge la piel sana (Tegaderm®, Opsite®). Tam- sión arterial.
bién, se encuentra con parte central absor- • Extensión del tejido necrótico: puede ob-
vente el Tegaderm® pad. En caso de no servarse desde edema leve, eritema y cos-
contar con este recurso, se puede diseñar tras, hasta drenaje purulento con tejido
el apósito con gasa y esparadrapo, tenien- necrótico húmedo o seco, según la natura-
do en cuenta las medidas de protección de leza e intensidad del traumatismo.
la piel sana, por ejemplo, la aplicación de • Contaminación aparente de la herida y pre-
tintura de benjui previa a la adhesión del sencia de cuerpos extraños.
esparadrapo.

ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA
El uso de películas antimicrobianas en forma
indiscriminada puede reducir la colonización • Control de la hemorragia local (presión di-
bacteriana e interferir con la sensibilización y recta, elevación de la zona afectada).
resistencia bacteriana. • Monitoría de los signos vitales.
• Inserción de una línea para administración
intravenosa de soluciones salinas (lactato
de Ringer o SSN) si ha habido pérdida im-

1388
CAPÍTULO VI: MANEJO DE HERIDAS TRAUMÁTICAS

portante de volumen circulatorio o el pa- riesgo más alto de infección; deben dejar-
ciente está hipotenso o en shock. se abiertas para que cierren por segunda
• Colocación de la parte afectada en una intención. Las heridas de la mano son las
posición cómoda. de mayor riesgo de infección.
• Rasurado de la zona, eliminando la menor • Al terminar la limpieza y el cierre, aplicar
cantidad de pelo posible y nunca rasuran- una capa delgada de ungüento de antibió-
do las cejas. tico, utilizando un elemento estéril, o colo-
• Limpieza e irrigación de la herida y de la car una gasa impregnada.
piel circundante con solución antiséptica y • Aplicar un vendaje seco. Puede ser nece-
SSN. sario aplicar compresión suave para dis-
• Asistir en la administración de anestésico minuir el edema secundario a la respuesta
local. inflamatoria y para controlar la hemorragia.
• Administración de sedantes como adyuvan- • Colocar férula en caso de que esté indica-
tes de la anestesia local, según prescrip- da la inmovilización parcial de la zona.
ción médica.
• Aplicación de vacuna antitetánica (ver guía
de Tétanos en esta misma serie) y de anti- INSTRUCCIONES VERBALES Y ESCRITAS AL
bióticos apropiados según la prescripción. PACIENTE Y FAMILIA:

• Aplicar hielo o calor local, según la necesi-


LACERACIONES SUPERFICIALES: dad.
• Mantener la herida y el vendaje limpios y
• Permitir que la herida se seque al aire am- secos; la herida debe estar cubierta durante
biente o secarla con suavidad con una las primeras 48 horas. Cambiar el vendaje
gasa. si está húmedo o sucio.
• Aplicar una capa delgada de ungüento de • Observar si hay enrojecimiento, tumefac-
antibiótico, utilizando un elemento estéril. ción, calor local o fiebre, supuración.
• Aplicar un apósito estéril seco sobre el • Tomar los medicamentos prescritos.
área, según necesidad. • Elevar la parte afectada.
• Concertar una cita de seguimiento para re-
tirar suturas.
LACERACIONES PROFUNDAS: • Emplear protector solar sobre la herida
durante no menos de seis meses después
• Irrigar el área con SSN utilizando jeringa del cierre.
con catéter intravenoso calibre 18, sin man-
dril, a una distancia aproximada de 2,5-5
cm de la herida.
• Ayudar en el desbridamiento.
ABRASIÓN
• Preparar para el cierre de la herida.
• Las heridas limpias con menos de ocho Pérdida parcial del espesor de una zona de la
horas de antigüedad pueden cerrarse con piel, con alguna pérdida de líquido y mínima
suturas o cintas tipo mariposa o Steri o ninguna hemorragia, por ejemplo las “ras-
strips®. paduras” como consecuencia de caídas, ara-
• Las heridas de más de 8-12 horas pueden ñazos o quemaduras por fricción con sogas.
considerarse contaminadas y tienen un

1389
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

EXPLORACIÓN FÍSICA aproximación de los bordes de la herida. Se


observa generalmente en heridas que afec-
Cantidad de tejido lesionado: se relaciona con tan el extremo distal de los dedos y la punta
dolor en el área de la lesión, edema localiza- de la nariz. El problema inmediato es la he-
do como resultado de la vasodilatación capi- mostasia. Las avulsiones pequeñas suelen
lar y eritema por la respuesta inflamatoria. cicatrizar por segunda intención, pero las más
extensas pueden requerir injertos cutáneos
parciales.
ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA
Exploración física: magnitud de la hemorra-
• Limpieza de la herida dentro de las 8 a 10 gia.
horas siguientes a la lesión para retirar los
cuerpos extraños incrustados y evitar el “ta- Procedimientos diagnósticos: exploración
tuaje traumático” o el oscurecimiento del radiológica en caso de lesión “en forma de
tejido cicatrizal. guante” con posible fractura asociada.
• Si es necesario, se utilizan cepillos quirúr-
gicos, cepillos dentales estériles, pinzas o
la punta de una hoja de bisturí Nº 11. Es ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA
posible que sea necesario desbridar.
• Premedicación con un anestésico local tó- • Elevación de la zona afectada.
pico o inyectable según esté indicado en • Aplicación de gasa estéril, empapada en
el servicio de urgencias. SSN.
• Colocación de un vendaje si hay exudado • Aplicación de presión constante directa
o si es en un área de probable contamina- para controlar la hemorragia.
ción (manos, pies y codos). • Cuidado del tejido amputado:
• Administración de medicamentos prescri- - Preservarlo en gasa empapada en SSN
tos (toxoide tetánico, antibióticos). y dejarlo en una bolsa plástica estéril se-
• Instrucciones verbales y escritas al pacien- llada.
te y su familia: - Colocar la bolsa en un recipiente con sue-
• Cambio de vendaje y aplicación de ungüen- ro fisiológico o agua helada, aseguran-
to antibiótico cuando esté indicado. do que no entre en contacto con el teji-
• Lavar la zona cuatro veces al día si hay do. La temperatura óptima es 4°C; el hielo
restos de suciedad, y cubrir. seco no se debe utilizar, puesto que ge-
• Evitar la luz solar directa en la zona duran- nera temperaturas demasiado bajas.
te seis meses, debido al riesgo de cam- - No cortar ningún puente tisular, indepen-
bios en la pigmentación. dientemente de lo delgados que sean;
• Tomar los medicamentos ordenados. se trata como una amputación parcial y
• Concertar una cita de seguimiento. se inmoviliza para conservar la integri-
dad del puente cutáneo.
• Evitar torniquetes, ligadura y “pinzamiento”
AVULSIÓN de los vasos en el muñón, porque estas
maniobras pueden lesionar las estructuras
La avulsión se refiere a la pérdida del espe- que se anastomosan si hay posibilidad de
sor total del tejido, que sufre un desgarro com- reimplatación. Se puede controlar la hemo-
pleto o queda colgando, lo cual impide la rragia con presión directa; asimismo, se

1390
CAPÍTULO VI: MANEJO DE HERIDAS TRAUMÁTICAS

puede aplicar un manguito de presión HERIDA PUNZANTE


arterial inflado en la porción proximal de la
extremidad, 30 mmHg por encima de la La herida punzante se produce cuando un
presión arterial sistólica, durante periodos objeto afilado o romo penetra en un tejido. Se
breves (< 30 minutos). presentan con mayor frecuencia al pisar cla-
• Evitar la anestesia de bloqueo digital del vos, “chinches”, agujas o vidrios rotos y trope-
muñón. zar o ser agredido con un objeto afilado. Son
• Todo tejido amputado o arrancado se debe pequeñas heridas que sangran en escasa
conservar, aunque no se intente su cantidad y tienden a cerrarse, lo cual conlleva
reimplantación; el tejido se puede usar para un elevado potencial de infección. Las heri-
injertos. das punzantes cercanas a las articulaciones
• Limpieza de la herida e irrigación profusa. tienen el riesgo de inoculación bacteriana de
• Ante una avulsión pequeña, aplicar una la articulación y sepsis. Una herida punzante
gasa impregnada con vaselina u otro ma- en la planta de los pies implica riesgo de celu-
terial antiadherente y dejar un vendaje com- litis, condritis y osteomielitis. Las heridas pun-
presivo. zantes a través de los zapatos aumentan el
• Ante una avulsión importante, colocar una riesgo de infección de los tejidos blandos por
gasa impregnada con vaselina u otro ma- pseudomonas y también de osteomielitis.
terial antiadherente sobre la zona lesiona-
da y aplicar un vendaje en capas.
• En una lesión de “retirada de guante”, EXPLORACIÓN FÍSICA
realinear los tejidos blandos para evitar ma-
yor lesión, cubrir con vendaje estéril, pre- Cálculo de la profundidad de la herida.
parar para el traslado a salas de cirugía Cálculo de la edad de la lesión por la colora-
para desbridamiento e injerto. Administrar ción de la superficie de la piel: azul/rojo (en
un anestésico local o analgesia con opiodes las últimas horas), púrpura (la semana ante-
o benzodiazepina por vía endovenosa, se- rior), verde/amarillenta (dos o tres semanas),
gún la prescripción médica, antes de la lim- amarilla/café (tres a cuatro semanas).
pieza y la irrigación de la herida. Se aplica
un vendaje, si la herida requirió sutura en
el servicio de urgencias. ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA
• Administrar medicamentos prescritos
(toxoide tetánico, antibióticos). • El tratamiento se dirige al alivio y la pre-
• Instrucciones verbales y escritas al pacien- vención del edema y del daño tisular adi-
te y la familia: cional.
- Elevar la zona para reducir la hemorra- • Asistir al médico en la administración de
gia y el edema. anestésico local, cuando la herida punzan-
- Aplicar hielo local. te tenga que ser explorada o requiera ex-
- Cuidados de la herida y el vendaje. tracción de cuerpo extraño.
- Observar la aparición de signos de in- • Administración de analgesia según indica-
fección. ción médica.
- Tomar los medicamentos, según pres- • Asistir en la incisión, desbridamiento e irri-
cripción médica. gación de heridas gravemente contamina-
- Concertar una cita para cuidados de se- das.
guimiento.

1391
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Cubrimiento de la herida y aplicación de 2. Ferguson A. Traumatic Wounds. Infection Control.


vendaje. Kingston University. 2000. www. Trauma.org/nur-
• La extremidad afectada debe inmovilizarse se/wound.html
3. Layman ME Incisión y drenaje. En: Procedimien-
durante 24 a 48 horas, dependiendo de la
tos de Enfermería de Urgencias. J Proehl (editor).
localización y la gravedad del traumatismo, Editorial McGraw-Hill. Barcelona, 1991.
mediante vendaje, férula o cabestrillo. 4. Lindsey C, Short K. Cuidado de las heridas. En:
• Administración de medicamentos, según Urgencias en Enfermería. P Stinton, P Sturt (edi-
prescripción (toxoide tetánico, analgésico tores). Editorial Océano. Barcelona, 2000.
o antibióticos). 5. Lindsey C, Short K. Traumatismos superficiales.
• Instrucciones verbales y escritas al pacien- En: Urgencias en Enfermería. P Stinton, P Sturt
te y familia: (editores). Editorial Océano. Barcelona, 2000.
6. Marjone E, Kinney A. Adhesivos tisulares. Una so-
- Observar para la detección de signos de
lución adhesiva para el tratamiento de heridas.
infección. Nursing 2001; 19:36-37.
- Aplicar hielo durante las primeras 24 a 7. Miller C. Limpieza e irrigación de las heridas. En:
48 horas y después calor durante 48 a Procedimientos de Enfermería de Urgencias. J
72 horas. Proehl (editor). Editorial McGraw -Hill. Barcelona,
- Elevar el área lesionada. 1991.
8. Proehl J. Suturas cutáneas adhesivas. En:
Procedimientos de Enfermería de Urgencias. Edi-
LECTURAS RECOMENDADAS torial McGraw-Hill. Barcelona, 1991.
9. Proehl J. Cuidado de las heridas en caso de ampu-
1. Dearden CH. Traumatic wounds: cleaning and taciones. En: Procedimientos de Enfermería de
dressing. Nursing Times 2001; 97:50-58. Urgencias. Editorial McGraw-Hill. Barcelona, 1991.

1392
CAPÍTULO VII: TRIAGE HOSPITALARIO

CAPÍTULO VII

Triage hospitalario

Mario Dueñas, MD
Médico General Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá

Martha Velandia, Enf.


Gerente, Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a guía de triage en el servicio de Urgen-


cias surge de la necesidad de contar con
un instrumento confiable para determinar la
mentar y nunca pretende dejar de lado el jui-
cio clínico del profesional que realiza la eva-
luación del paciente.
complejidad de la urgencia del paciente, que
permita mayor objetividad en el proceso, faci-
lite el desarrollo de las habilidades de la en- DEFINICIÓN
fermera para la evaluación del paciente y de
disponer de un manual de consulta durante la
El triage es un método de selección y clasifi-
toma de decisiones.
cación de pacientes, basado en sus requeri-
mientos terapéuticos y los recursos disponi-
El sistema de triage no debe ser convertido en
bles.
un mero procedimiento administrativo, pues su
objetivo principal es identificar el paciente en
estado crítico; los niveles de priorización están
diseñados con base en criterios clínicos. OBJETIVOS

Este modelo de triage comprende la adopción • Asegurar una valoración rápida y ordena-
de un sistema de clasificación de la urgencia da de todos los pacientes a su llegada a
del paciente adulto en tres niveles de com- Urgencias, para identificar los casos agu-
plejidad, una guía de evaluación del paciente dos que requieren una atención médica in-
basada en signos y síntomas organizados por mediata.
sistemas, un formato de triage de fácil • Organizar el ingreso de los pacientes para
diligenciamiento y la estandarización del pro- su atención, según la prioridad y los recur-
ceso. sos físicos y humanos disponibles.
• Asignar el área de tratamiento adecuada.
Un sistema de triage debe estar diseñado • Disminuir la ansiedad del paciente y la fa-
acorde con los recursos físicos, humanos, la milia al establecer una comunicación ini-
demanda de servicios y las políticas institu- cial y proveer información sobre el proce-
cionales del hospital en que se vaya a imple- so de atención.

1393
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

NIVELES DE PRIORIZACIÓN oportuna a los familiares acerca de la evo-


lución de los pacientes.
La priorización de la atención del paciente 7. Informar y educar a los usuarios sobre la
comprende tres niveles, organizados de ma- utilización óptima y racional del servicio de
yor a menor complejidad. urgencias.

PRIORIDAD I Paciente que presenta una si-


tuación que amenaza la vida o un riesgo de ESTANDARIZACIÓN DEL PROCESO
pérdida de una extremidad u órgano si no re- DE TRIAGE
cibe una atención médica inmediata; también
se incluye en esta categoría el paciente con La estandarización comprende el flujograma
dolor extremo. que describe la ruta del paciente de acuerdo
con la prioridad de atención; el responsable
PRIORIDAD II Paciente con estabilidad de la atención y las actividades (Tabla 1).
ventilatoria, hemodinámica y neurológica,
cuyo problema representa un riesgo de ines-
tabilidad o complicación.
CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN
PRIORIDAD III Paciente con estabilidad
ventilatoria, hemodinámica y neurológica sin El procedimiento de triage se inicia con una
riesgo evidente de inestabilidad o complica- evaluación rápida del paciente en el momen-
ción. to de su llegada al Departamento de Urgen-
cias; mediante la aplicación del ABC de la
reanimación se obtiene la primera impresión
del estado general del paciente y se determi-
FUNCIONES DE LA ENFERMERA na el registro en el consultorio de triage o el
DE TRIAGE traslado inmediato al área de tratamiento.

1. Recibir el paciente en el sitio de llegada, La información está organizada de acuerdo


realizando una adecuada inmovilización y con la severidad y la prioridad de atención en
traslado hasta el área de tratamiento. los siguientes grupos: signos y síntomas ab-
2. Valorar y clasificar el paciente. dominales y gastrointestinales; signos y sín-
3. Ingresar el paciente prioridad I al área de tomas cardiovasculares; signos y síntomas
tratamiento. respiratorios; signos y síntomas neurológicos;
4. Diligenciar en forma completa la historia signos y síntomas musculoesqueléticos; sig-
clínica de triage. nos y síntomas oculares, signos y síntomas
5. Iniciar el contacto con el paciente y la fa- genitales masculinos; signos y síntomas del
milia e informarles acerca del proceso de oído; signos y síntomas de nariz, boca y gar-
atención en el Departamento de Urgencias. ganta; signos y síntomas urinarios; signos y
Esta información, idealmente, debe ser síntomas de los genitales y del sistema
complementada con un instructivo para el reproductor femenino; signos y síntomas psi-
paciente. cológicos; signos y síntomas del sistema
6. Mantener comunicación con el personal tegumentario; signos y síntomas del sistema
médico y de enfermería de las áreas de endocrino y los signos vitales.
tratamiento para proporcionar información

1394
CAPÍTULO VII: TRIAGE HOSPITALARIO

TABLA 1. PROCESO DE TRIAGE

INICIO

Paciente 1. Ingresa por diferentes medios de llegada al servicio


INGRESAR
PACIENTE de Urgencias. El personal de seguridad orienta al pa-
ciente / acompañante para la valoración por la enfer-
mera. Si no puede caminar, saca silla de ruedas o
EVALUAR
camilla e informa a la enfermera del triage.
EN EL SITIO 2. Valora el estado del paciente mediante el interrogato-
DE LLEGADA
Enfermera
rio (nombre, edad, motivo de consulta) y valoración
del estado de consciencia y los signos vitales. Asigna
SI una prioridad de atención.
PRIORIDAD
I? 3. ¿El estado del paciente es prioridad I?
1
NO
INICIAR Enfermera / Personal 4. SI. El paciente prioridad I pasa a ser atendido inme-
EL MANEJO Y Asistencial
TRATAMIENTO
diatamente en urgencias. La enfermera del triage tras-
lada el paciente al área de tratamiento y lleva al acom-
EVALUAR EN
pañante o documentos del paciente a la oficina de
EL CONSULTORIO admisiones para el ingreso administrativo.
DE TRIAGE
Enfermera 5. NO. Ingresa el paciente al consultorio y realiza la eva-
luación.

PRIORIDAD
II ó III? 6. ¿El paciente es prioridad II ò III?
NO
7. NO. El paciente es prioridad I y se inicia el manejo.
SI (Ver actividad Nº 4).

REGISTRAR EN LA
OFICINA DE ADMISIONES
Representante de 8. SI. Realiza el ingreso administrativo del paciente.
admisiones

9. ¿El área de tratamiento requerida se encuentra dis-


ÁREA DE ponible?
TRATAMIENTO
DISPONIBLE NO
ESPERAR 10. NO. El paciente espera un turno de llamado. La en-
TURNO fermera reevalúa periódicamente los pacientes que
SI
se encuentran en la sala de espera.
2
INGRESAR AL ÁREA
DE TRATAMIENTO Auxiliar de Enfermería / 11. SI. Los pacientes prioridad II reciben atención médica
Médico / Enfermera antes que los pacientes prioridad III.
FIN

1395
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 2. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS ABDOMINALES Y GASTROINTESTINALES

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


ABDOMINALES Y • Dolor abdominal severo constante • Enterorragia moderada • Vómito sin sangre
GASTRO- • Trauma abdominal penetrante • Sangrado rectal sin otro • Diarrea sin compromi-
INTESTINALES • Parto en curso compromiso so del estado general
• Retraso con menstrual sangrado • Emesis en “cuncho de café” del paciente
vaginal y dolor abdominal severo • Lesión abdominal reciente • Flatulencia
• Dolor abdominal acompañado de (menor de 24 horas) sin dolor • Náuseas
diaforesis, náusea, dolor en severo, sangrado o shock • Estreñimiento
miembro superior izquierdo, • Dolor abdominal intermitente, vó- • Eructos
disnea y angustia mito, diarrea, deshidratación leve • Regurgitación
• Dolor abdominal, vómito o diarrea • Imposibilidad para tragar sin • Pirosis
con signos de deshidratación dificultad para respirar • Anorexia
• Trauma abdominal cerrado • Dolor abdominal en mujer • Hiporexia
(menor de 24 horas), dolor sexualmente activa • Cólico menstrual
severo, sangrado y signos de • Dolor abdominal, sangrado
shock vaginal y fiebre
• Enterorragia masiva • Dolor abdominal localizado,
• Hematemesis masiva constante o intermitente tolerable
• Ingesta de tóxicos por el paciente

TABLA 3. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS CARDIOVASCULARES

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III

CARDIOVASCULARES • Dolor torácico irradiado a cuello o brazo, acom- • Dolor torácico que
pañado de diaforesis, disnea, náuseas o angustia aumenta con la
• Ausencia de pulso inspiración profunda
• Cianosis • Dolor torácico asociado
• Hipertensión o hipotensión severas a tos y fiebre
• Palpitaciones acompañadas de pulso irregular, • Dolor torácico
diaforesis, náuseas, alteración del estado de relacionado con la
alerta o alteración neurosensorial rotación del tronco o
• Hipertensión ( mayor de140/90 mmHg) asociada palpación
a cefalea, alteración neurosensorial, alteración • Episodio autolimitado
del estado de alerta, dolor torácico o epistaxis de palpitaciones sin
• Lesión penetrante en tórax compromiso del estado
• Exposición eléctrica con pulso irregular general
• Lesión penetrante en vasos sanguíneos • Sangrado activo en
• Taquicardia o bradicardia paciente con antece-
• Paciente en shock dente de hemofilia
• Dolor torácico con antecedente de enfermerdad
coronaria
• Dolor torácico acompañado de pulsos
asimétricos.
• Dolor torácico no irradiado (sin disnea o pulso
irregular, sin cambios en el color de la piel o
diaforesis)
• Lipotimia en paciente con marcapaso
• Sangrado activo y signos de shock

1396
CAPÍTULO VII: TRIAGE HOSPITALARIO

TABLA 4. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS RESPIRATORIOS

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


RESPIRATORIOS • Disnea súbita posterior a inhalación • Tos con expectoración y • Tos seca o
de sustancias químicas fiebre productiva hialina,
• Quemadura de la vía aérea • Disnea moderada progresiva rinorrea, malestar
• Disnea de inicio súbito • Hemoptisis moderada general, con o sin
• Disnea acompañada de cianosis, • Dolor torácico relacionado fiebre
sibilancias audibles con la inspiración profunda • Disfonía
• Disnea con tirajes • Disnea progresiva en • Tos seca
supraclaviculares, intercostales, paciente con antecedente de • Tos crónica sin
aleteo nasal o estridor EPOC signos de dificultad
• Hemoptisis masiva respiratoria
• Trauma penetrante en tórax
• Apnea
• Obstrucción de la vía aérea (cuerpo
extraño, tapón de moco, trauma
facial, inmersión)
• Trauma cerrado de tórax acompa-
ñado de dolor torácico, disnea
súbita o respiración asimetríca

TABLA 5. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS NEUROLÓGICOS

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


NEUROLÓGICOS • Estado epiléptico o episodio de con- • Historia de síncope o lipotimia
• Cefalea crónica sin
vulsión con recuperación total sin défi-
síntomas asociados
• Pérdida o deterioro progresivo del cit neurológico
• Dolor crónico y
estado de conciencia con o sin trau- • Trauma en cráneo sin pérdida
parestesias en
ma de conciencia, sin déficit neuro-
extremidades
• Trauma en cráneo con pérdida del lógico
• Parestesias
estado de alerta o déficit neurológico • Cefalea intensa en paciente
asociadas a
• Trauma en columna con déficit con historia de migraña
ansiedad e
neurológico • Antecedente de convulsión con
hiperventilación
• Episodio agudo de pérdida o dismi- recuperación total sin déficit
nución de la función motora (disar- neurológico
tria, paresia, afasia) • Vértigo sin vómito
• Episodio agudo de confusión • Disminución progresiva en
• Episodio agudo de cefalea y cam- fuerza o sensibilidad de una o
bio en el estado mental más extremidades.
• Episodio agudo de cefalea y cifras • Cefalea asociada a fiebre y/o
tensionales altas vómito.
• Trauma penetrante en cráneo
• Pérdida súbita de la agudeza visual
• Vértigo con vómito incohersible
• Sordera súbita
• Trauma de cráneo en paciente anti-
coagulado o hemofílico

1397
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 6. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS MUSCULOESQUELÉTICOS

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


MUSCULO- • Fractura abierta con sangrado • Trauma en extremidad con de- • Dolor lumbar sin sínto-
ESQUELÉTICOS abundante o dolor intenso formidad y dolor tolerable sin mas asociados
• Fractura de huesos largos déficit neurológico o circulatorio • Espasmo muscular
• Amputación traumática • Dolor lumbar irradiado a miem- • Esguince
• Dolor severo en extremidad con bros inferiores y parestesias • Dolor en dorso locali-
compromiso circulatorio • Dolor articular en paciente zado
• Trauma por aplastamiento con do- hemofílico • Contusiones
lor severo o compromiso vascular • Trauma cerrado de mano y pie • Dolor muscular sin
o neurológico sin compromiso neurovascular otros síntomas
• Deformidad en articulación con • Lesiones de punta de dedo • Edema sin trauma
dolor intenso (luxación) • Limitación funcional
• Fracturas múltiples crónica
• Trauma en cadera con dolor inten- • Trauma menor
so y limitación para la movilización • Artralgias acompaña-
das de fiebre

TABLA 7. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS OCULARES

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


OJO • Trauma ocular químico o físico • Hifema (Sangre en la cámara • Hemorragia
agudo anterior) subconjuntival
• Visión borrosa o disminución • Cuerpo extraño • Cambios graduales de
súbita en la agudeza visual . • Dolor tipo punzada asociado visión no súbitos
• Trauma penetrante a cefalea • Secreción ocular y prurito
• Pérdida súbita de visión • Diplopía • Edema palpebral
• Dolor ocular • Trauma ocular no agudo
sin síntomas
• Ardor ocular
• Fotopsias (ver luces)
• Miodesopsias (ver puntos)
• Lagrimeo
• Halos al rededor de luces

TABLA 8. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS DE LOS GENITALES MASCULINOS

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


GENITALES • Dolor testicular severo, edema o • Dolor testicular leve, fiebre y • Secreción purulenta
MASCULINOS hipopigmentación sensación de masa • Cuerpo extraño sin
• Trauma en pene o escroto, dolor • Edema del pene molestia
severo e inflamación • Cuerpo extraño con molestia • Prurito o rash
• Dolor testicular moderado de va- perineal
rias horas • Trauma menor
• Abuso sexual • Masa en testículo
• Priapismo • Impotencia

1398
CAPÍTULO VII: TRIAGE HOSPITALARIO

TABLA 9. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS DEL OÍDO

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


OÍDO • Amputación traumática de la • Hipoacusia aguda pos trauma • Tinitus
aurícula • Tinitus, vértigo y fiebre • Cuerpo extraño en
• Otorragia u otoliquia pos trauma • Cuerpo extraño en oido, sangra- oido sin molestia
do o molestia • Hipoacusia
• Otalgia, otorrea y fiebre

TABLA 10. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS DE NARIZ, BOCA Y GARGANTA

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


NARIZ, BOCA Y • Rinorrea con sangre o cristalina • Epistaxis intermitente con histo- • Herida por punción en
GARGANTA posterior a trauma de cráneo ria de trauma o hipertensión paladar duro o blando
• Trauma facial con obstrucción de la arterial • Alergia, fiebre y con-
vía aérea o riesgo de obstrucción. • Trauma nasal asociado a dificul- gestión nasal
• Epistaxis asociada a presión arterial tad respiratoria leve • Trauma nasal sin difi-
alta, cefalea • Cuerpo extraño en nariz, dolor cultad respiratoria
• Sangrado abundante o dificultad respiratoria leve • Rinorrea, dolor malar
• Amputación de la lengua o herida o frontal y fiebre
de mejilla con colgajo • Cuerpo extraño en na-
• Disfonía con historia de trauma en riz sin molestia
laringe o quemadura • Odinofagia, fiebre y
• Odinofagia, sialorrea y estridor adenopatías
• Disnea, disfagia e instauración sú- • Lesiones en mucosa
bita de estridor oral
• Sangrado activo en cirugía recien- • Sensación de cuerpo
te de garganta, boca o nariz. extraño en faringe sin
• Cuerpo extraño en faringe asocia- dificultad respiratoria
do a disnea

TABLA 11. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS URINARIOS

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


URINARIOS • Dolor severo en dorso, hematuria • Cuerpo extraño uretral • Historia de dificultad
(sugestivo de urolitiasis) • Hematuria, disuria, polaquiuria, para la micción
• Retención urinaria aguda fiebre, vómito y escalofrío • Disuria o poliuria sin
• Trauma de pelvis con hematuria fiebre, vómito o esca-
o anuria lofrío
• Disminución en el flu-
jo urinario.
• Incontinencia
• Secreción de pus

1399
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 12. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS DE LOS GENITALES
Y DEL SISTEMA REPRODUCTOR FEMENINO

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


GENITALES Y • Trabajo de parto en curso • Abuso sexual mayor de 72 ho- • Prurito vaginal o flujo
SISTEMA • Sangrado vaginal o uretral seve- ras • Infertilidad
REPRODUCTOR ro posterior a trauma • Sangrado vaginal ( más de 10 • Determinar embarazo
FEMENINO • Retraso menstrual, dolor abdomi- toallas por día o pulso mayor de • Amenorrea sin san-
nal severo o irradiado a hombro 100 por minuto) grado o dolor
• Hemorragia vaginal severa duran- • Trauma en genitales externos, • Cuerpo extraño sin
te el embarazo (más de cuatro toa- hematoma o laceración molestia
llas por hora) • Sangrado vaginal pos aborto o • Dispareunia
• Amniorrea espontánea en el em- pos parto sin hipotensión o • Dismenorrea
barazo taquicardia • Irregularidad en el ci-
• Trauma en el embarazo • Cuerpo extraño con molestia clo menstrual
• Hipertensión arterial en el emba- • Dolor severo en mamas y fiebre • Prolapso vaginal
razo • Dolor abdominal acompañado • Disfunción sexual
• Convulsiones en paciente emba- de fiebre y flujo vaginal • Oleadas de calor
razada • Dolor abdominal pos parto, fie- • Mastalgia
• Choque en el embarazo bre y coágulos fétidos
• Abuso sexual menor de 72 horas • Disminución de movimientos
fetales
• Dolor abdominal pos quirúrgico
• Signos de infección en la herida
quirúrgica
• Sintomatología urinaria en mu-
jer embarazada

TABLA 13. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS PSICOLÓGICOS

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


PSICOLÓGICOS • Intento de suicidio o ideación • Depresión
suicida • Paciente desea evaluación
• Agitación psicomotora • Ansiedad
• Confusión • Trastornos de la alimentación
• Alucinaciones (anorexia y bulimia)
• Abuso de sustancias
• Insomnio

1400
CAPÍTULO VII: TRIAGE HOSPITALARIO

TABLA 14. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS DEL SISTEMA TEGUMENTARIO

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


TEGUMENTARIO • Mordeduras con sangrado • Mordedura de perro • Picaduras menores localiza-
abundante • Mordedura de serpiente o ara- das
• Mordedura o picadura con ña asintomática sin reacción • Lesión por frío sin hipo-
respuesta alérgica sistémica alérgica pigmentación y dolor leve
• Hipotermia, rash, petequias y • Hipotermia, palidez o cianosis • Laceración
fiebre localizada, sin dolor • Herida menor por punción
• Quemadura por calor o frío con • Rash, dolor osteomuscular • Retiro o revisión de sutura
deshidratación o compromiso generalizado, fatiga y fiebre • Herida infectada localizada
general del paciente. • Quemadura sin compromiso • Rash sin fiebre o síntomas
• Quemadura en cara, cuello, del estado general del pacien- sistémicos
manos, pies y genitales te y dolor tolerable • Celulitis
• Herida penetrante con • Cuerpo extraño en tejidos
hemorragia incontrolable blandos
• Lesión en nervio, tendón o • Rash de aparición súbita,
vaso sanguíneo pruriginoso sin compromiso
• Reacción alérgica con respiratorio
compromiso ventilatorio o • Lesiones en piel sin compro-
hemodinámico miso del estado general
• Quemadura solar grado I
• Adenopatías
• Descamación, prurito
• Excoriaciones
• Resequedad
• Diaforesis sin síntomas aso-
ciados

TABLA 15. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON SIGNOS Y SÍNTOMAS DEL SISTEMA ENDOCRINO

SIGNOS Y SÍNTOMAS PRIORIDAD I PRIORIDAD II PRIORIDAD III


ENDOCRINO • Deshidratación • Poliuria • Intolerancia al calor o frío
Los signos y síntomas • Polipnea o respiración • Polidipsia • Pérdida de peso
descritos para este sis- de Kussmaul • Diaforesis • Polifagia
tema deben ser correla- • Hipotermia • Temblor • Obesidad
cionados con las condi- • Diaforesis profusa • Oleadas de calor
ciones clínicas del pa- • Tetania (espasmo muscu-
ciente. lar fuerte súbito)

1401
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 16. CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN DE ACUERDO CON LOS SIGNOS VITALES*

PRESIÓN ARTERIAL PULSO FRECUENCIA TEMPERATURA


RESPIRATORIA
EDAD SISTÓLICA DIASTÓLICA EDAD VALOR EDAD VALOR EDAD VALOR
1 – 5 años <80 >110 <50 >80 RN <120 >180 RN < 30 >50 0 – 5 años < 35°C >39°C
5 – 7 años <80 >120 <50 >80 1 año <100 >130 6 meses <20 >40 0 – 5 años 37.8°C
(Antecedentede
convulsión febril)
7 – 10 años <85 >130 <55 >90 2 años <90 >120 1 – 2 años <20 >30
10 – 12 años <85 >135 <55 >95 4 años <80 >110 2 – 6 años <15 >25 Adulto < 35°C >40°C
> 12 años <90 >140 <60 >95 > 8 años <70 >100 Adulto < 12 >30
Adulto < 70 >200 < 40 >110 Adulto < 40 >150

* Los valores que se encuentren por fuera de los límites de normalidad son considerados PRIORIDAD I. Sin embargo, los signos
vitales aislados no son patrón de clasificación; deben ser correlacionados con el cuadro clínico del paciente.

FORMATO DE TRIAGE

El formato de triage debe ser un documento de fácil diligenciamiento y que tome el menor
tiempo posible; esto acortará el tiempo de espera para la evaluación de los demás pacientes
(figura 1).

PRIORIDAD I II III
FECHA: HORA:
NOMBRE: EDAD:

MOTIVO DE CONSULTA:

GLASGOW ____/4 ____/6 ____/5 ____/15


ALERTA OBNUBILACIÒN ESTUPOR COMA

SIGNOS VITALES
PA ____ / ____ FC ____ FR ____ T -____ PULSO: REGULAR IRREGULAR

ANTECEDENTES RELEVANTES

FIRMA:

Figura 1. Formato de triage.

1402
CAPÍTULO VII: TRIAGE HOSPITALARIO

LECTURAS RECOMENDADAS

1. American College of Surgeons. ATLS, Programa 10. Kennedy K, Aghababian RV, Gans L, et al. Triage:
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médicos. techniques and applications in decision making. Ann
Sexta edición. Comité de Trauma del Colegio Ame- Emerg Med 1996; 28:136–144.
ricano de Cirujanos. Chicago, 1997. 11. Lowe R, Bindman A, Ulrish S, et al. Refusing care to
2. Brillman J, Doezema D. Triage: limitations in Emergency Department patient: evaluation of
predicting need for emergent care and hospital published triage guidelines. Ann Emerg Med 1994;
admission. Ann Emerg Med 1996; 27:493– 500. 23:286–293.
3. Cook S, Sinclair D. Emergency Department triage: a 12. Loyola University Medical Center. Emergency
program assesment using the tools of continuous Department: triage protocol. 1992.
quality improvement. Emerg Med 1993; 15: 889–894. 13. Mower W, Sachs C, Nicklin E, et al. Pulse oxymetric
4. Derlet R, Kinser D. The Emergency Department and as a fifth paediatric vital sign. Pediatrics 1997;
triage of non urgent patients: editorial . Ann Emerg 99:681– 686.
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5. Derlet R, Kinser D, Lou R, et al. Prospective na de Hospitales y Clínicas. Bogotá, 2000.
identification and triage of nonemergency patients 15. Sampalis J, Lavoie A, Williams J, et al. Impact of
out of an Emergency Department: a 5 years study. onsite care, prehospital time and level of in hospital
Ann Emerg Med 1996; 25:215–223. care on survival in severely injured patients. J Trau-
6. Derlet R, Reynolds J. Triaging patients with abdomi- ma 1993; 34:252–261.
nal pain out of the Emergency Department: three 16. Soler E, Escalante H. Triage en Urgencias. Funda-
months feasibility study. University of California, Davis ción Cardio Infantil. Bogotá, 2000.
Medical Center. 17. Waldrop R, Harper D, Mandry C, et al. Prospective
7. Estrada E. Triage System. Nurs Clin North Am 1981; assessment of triage in an urban Emergency
16:13–24. Department. Sout Med J 1997; 90: 1208–1212.
8. George S, Read S, Westakle, et al. Evaluation of 18. Williams R. Triage and Emergency Department
nurse British accident at Emergency Department. services. Ann Emerg Med 1996; 27:506–506.
BMJ 1992; 304:876– 878. 19. Vanegas S. Protocolo de triage del Departamento
9. Vicepresidencia Prestadora de servicios de Salud. de Urgencias. Fundación Santa Fe de Bogotá. Bo-
Triage de Urgencias. Instituto de Seguros Sociales. gotá, 1995.
Bogotá, 1999.

COLABORADORES

CARREÑO R. JOSE NEL, MD. Neurocirujano, Fundación Santa Fe de Bogotá.


DUQUE ARISTIDES, MD. Neurólogo, Fundación Santa Fe de Bogotá.
GARCÍA JUAN MANUEL, MD. Otorrinolaringólogo, Fundación Santa Fe de Bogotá.
GONZÁLEZ JUAN CARLOS, MD. Ortopedista, Fundación Santa Fe de Bogotá.
HOLGUÍN R. FRANCISCO, MD. Cirujano General, Medihealth
JARAMILLO MÓNICA, MD. Cardióloga. Fundación Santa Fe de Bogotá.
JIMÉNEZ MARIA FERNANDA, MD. Cirujana General. Fundación Santa Fe de Bogotá.
MARTÍNEZ MARÍA CLARA, MD. Psiquiatra, Fundación Santa Fe de Bogotá.
MORALES ALVARO, MD. Neumólogo. Fundación Santa Fe de Bogotá.
MORALES YOVANNA, MD. Pediatra. Fundación Santa Fe de Bogotá.
MORENO BERNARDO, MD. Ginecoobstetra, Fundación Santa Fe de Bogotá.
PINZÓN MARÍA CLARA, MD. Internista, Fundación Santa Fe de Bogotá.
SÁNCHEZ JUAN CAMILO, MD. Oftalmólogo, Fundación Santa Fe de Bogotá.
SERRANO ADOLFO, MD. Urólogo, Fundación Santa Fe de Bogotá.
TORO MARÍA INÉS, MD. Endocrinóloga, Fundación Santa Fe de Bogotá.

1403
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO VIII

Gerencia de la atención del paciente en el servi-


cio de urgencias de un hospital de tercer nivel

Martha Lucena Velandia


Enfermera Especialista en Gerencia de Instituciones de
Seguridad Social en Salud.
Gerente, Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá

PRESENTACIÓN

L a Organización Panamerica de la Salud


(OPS) define Gerencia como la “acción
institucional que viabiliza la óptima aplicación
ras que se desempeñan en los servicios de
urgencias, quienes mediante su labor diaria
hacen realidad los planes de acción.
de recursos para el logro de objetivos prede-
terminados, mediante un proceso continua- La guía está diseñada con base en un modelo
mente retroalimentado de toma de decisiones, de administración denominado “Gestión Inte-
para la organización y ejecución de activida- gral por Calidad”. Esta es una metodología de
des con información cierta y pertinente”. amplia trayectoria en la industria manufactu-
rera y de servicios, que recientemente ha to-
La elaboración de una guía de gerencia de un mado gran auge en el sector salud. Se propo-
servicio de salud debe contemplar el análisis ne un modelo de la metodología aplicada en
de múltiples factores que intervienen en la pla- la gestión del cuidado de enfermería en el ser-
neación, ejecución y control del servicio. Es- vicio de urgencias y la experiencia del uso de
tos factores, entre otros, son: el entorno del esta herramienta por parte de la autora, cuya
sector y del país, la plataforma estratégica utilidad radica en que es un modelo replicable.
institucional, la misión del área de acuerdo con
el nivel de complejidad de la institución, el tipo
de servicio y el perfil del usuario. Asimismo, OBLIGACIÓN LEGAL
debe tener como marco de acción las políti- EN LA ATENCIÓN DE URGENCIAS
cas y las normas estatales.
Las normas constitucionales y legales impo-
Este documento no pretende ser más que una nen a las Instituciones Prestadoras de Salud
orientación del quehacer gerencial del profe- (IPS) la obligación de brindar atención de ur-
sional de la salud que tiene a su cargo la ges- gencias a toda persona que la solicite, sin im-
tión de los servicios de urgencias de manera portar su gravedad y sin condicionarla a re-
gobal o específica en el área de su competen- querimientos económicos o contractuales
cia. Está dirigido especialmente a las enferme- (www.minsalud.gov.co).

1404
CAPÍTULO VIII: GERENCIA DE LA ATENCIÓN DEL PACIENTE EN EL SERVICIO DE URGENCIAS DE UN HOSPITAL DE TERCER NIVEL

CARACTERÍSTICAS ESPECIALES SISTEMA DE GARANTÍA


DE LOS SERVICIOS DE URGENCIAS DE CALIDAD
Los hospitales poseen características propias Toda acción que se desarrolle para atender la
en su organización y funcionamiento que ha- demanda de servicios por parte del paciente,
cen más complejo su manejo administrativo la familia o la comunidad debe estar concebi-
en cuanto a que la mayor parte de las empre- da dentro de lineamientos filosóficos de ex-
sas tienen como objetivo transformar una ma- celencia en la calidad de la atención en sa-
teria prima en un producto tangible. Esta si- lud. El SGSSS contempla la existencia de un
tuación es aún más crítica en el servicio de Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad
urgencias, si se tienen en cuenta las circuns- para los actores del sistema en las diferentes
tancias de modo, tiempo y lugar de prestación fases de prestación del servicio, reglamenta-
del servicio. Las siguientes son algunas de do mediante el decreto 2174 de 1996.
esas características:
Partiendo de esta premisa, se puede afirmar
• Las implicaciones médico legales que sig- que la razón de ser de la gestión de la presta-
nifican un especial riesgo para el personal ción de la atención de urgencias es garantizar
asistencial. la excelencia en la calidad, lo cual redunda
• El control del gasto es difícil debido a que en el beneficio del paciente, constituye el único
existen múltiples ordenadores y las actua- elemento de diferenciación del prestador y le
ciones en ocasiones son de difícil auditoría ofrece una ventaja competitiva frente a otros
y control. prestadores. Las siguientes definiciones son
• El usuario (paciente o familia) presenta una pertinentes:
labilidad emocional como respuesta a la
alteración del estado de su salud, que exi- Calidad: existen múltiples definiciones sobre
ge un mayor esfuerzo para la satisfacción calidad; sin embargo, la definición de Donabe-
de sus expectativas. dian expresa en forma breve las dimensiones
• El resultado de la atención médica no siem- de la calidad: lograr los mayores beneficios,
pre es el esperado por el paciente o sus con los menores riesgos posibles para el pa-
familiares y, en muchas ocasiones, ni por ciente, dados los recursos disponibles.
el propio profesional de la salud.
• La resistencia al cambio que ofrecen los Garantía de calidad: conjunto de acciones
profesionales de la salud a la nueva forma que deliberada y sistemáticamente realizan los
de ejercicio de la medicina gerenciada con individuos, las organizaciones y la sociedad
enfoque en la satisfación del usuario y la para generar, mantener o mejorar la calidad.
supervivencia del hospital.
• Tecnología de alto costo y de rápida Sistema de garantía de calidad: conjunto de
obsolescencia. acciones sistemáticas, continuas y delibera-
• Un sistema de salud, el Sistema General das, dirigidas a evitar, prevenir o resolver opor-
de Seguridad Social en Salud (SGSSS) que tunamente situaciones que puedan afectar
estableció la Ley 100 de 1993, en desarro- negativamente el logro de los mayores bene-
llo que aún no cuenta con las herramien- ficios posibles para los pacientes, con los
tas suficientes para garantizar el pago de menores riesgos.
la atención que se presta en el servicio de
urgencias.

1405
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

GESTIÓN INTEGRAL POR CALIDAD lencia de la atención de los pacientes, la


idoneidad de su personal y la armonía del
Es una herramienta gerencial que compren- equipo de trabajo.
de tres áreas de trabajo: el direccionamiento • Incorporar el modelo de gestión integral por
estratégico, la cultura organizacional y la ge- calidad a las actividades asistenciales, de
rencia de procesos. gestión administrativa, de educación e in-
vestigación que se desarrollen en el servi-
cio de urgencias.
1. DIRECCIONAMIENTO
ESTRATÉGICO DE URGENCIAS OBJETIVOS

El direccionamiento estratégico institucional es • Garantizar la más alta calidad en la aten-


la base para la planeación estratégica del ser- ción de urgencias.
vicio de urgencias, y un proyecto de esta natu- • Mantener un equipo de profesionales idó-
raleza debe responder a una política institu- neos, permanentemente actualizado, ca-
cional. El apoyo de la alta gerencia del hospi- paz del manejo clínico del paciente y con
tal es fundamental para optimizar los recur- los conocimientos administrativos suficien-
sos humanos, económicos y técnicos. Así mis- tes que permitan su óptimo desempeño.
mo, es la responsable de unificar y consolidar, • Aportar a la solución de problemas del ser-
las normas y procedimientos que se generan; vicio de urgencias, de la institución y del
debido a la relación de interdependencia en- sector salud mediante la investigación.
tre las diferentes unidades del hospital, la • Garantizar la viabilidad económica del ser-
estandarización o modificación de procesos vicio de urgencias a través de la gestión
de un servicio puede afectar el funcionamien- administrativa y financiera.
to de otro. En otras palabras, la alta gerencia • Fomentar una cultura de calidad y de tra-
debe asegurar que se hable el mismo idioma bajo en equipo entre el personal asistencial,
entre los miembros del equipo de salud. administrativo y del área financiera.

MISIÓN ESTRATEGIAS

Implementar un sistema de atención integral, • Diseñar e implementar un sistema de in-


oportuna, eficiente y humana del paciente con formación gerencial (SIG) que sirva de so-
patología de urgencia, mediante la utilización porte a la toma de decisiones.
de guías de práctica clínica, la estandarización • Desarrollar e implementar un sistema de
de los procesos asistenciales, administrativos control y evaluación de los procesos clíni-
y del‘área financiera, para satisfacer las ex- co-asistenciales y administrativos.
pectativas de los usuarios, del equipo de sa- • Diseñar y mantener formas de escuchar la
lud y de las directivas de la institución. opinión y las sugerencias de los usuarios.
• Realizar un programa de educación conti-
nuada que responda a las necesidades del
POLÍTICAS personal.
• Elaborar guías propias y/o adaptar guías de
• Obtener el reconocimiento por parte de la manejo clínico de acuerdo con el perfil del
institución cómo un área líder en la exce- usuario y las condiciones de la institución.

1406
CAPÍTULO VIII: GERENCIA DE LA ATENCIÓN DEL PACIENTE EN EL SERVICIO DE URGENCIAS DE UN HOSPITAL DE TERCER NIVEL

• Identificar y desarrollar proyectos de inves- • Características del desempeño (conducta


tigación para estudios clínicos y de ges- productiva, sentido de responsabilidad, co-
tión en salud. laboración, orientación a resultados, trabajo
• Realizar mercadeo de los servicios y en equipo).
referenciación competitiva. • Frente a la competitividad (vocación de
servicio, orientación al usuario, valores de
PLAN DE ACCIÓN la calidad).
• Frente a la misión y la visión.
Las estrategias se traducen en planes de ac-
ción. Al formular el plan se define la meta, el Construir y mantener la cultura organizacional
responsable, el plazo y el cómo hacer. es un esfuerzo constante y se relaciona es-
trechamente con el nivel de satisfacción que
logra el colaborador a partir de su participa-
2. CULTURA ORGANIZACIONAL ción en el proceso de planeación y la toma de
decisiones, los sistemas de incentivos y reco-
Toda iniciativa de mejoramiento debe ir acom- nocimiento, la capacitación, la retroalimenta-
pañada de un proceso de transformación cul- ción positiva y el crecimiento personal y pro-
tural de la organización. La transformación fesional.
cultural es toda acción deliberada y planeada
que busca crear, evolucionar y/o fortalecer los
rasgos culturales deseables de una organiza- 3. GERENCIA DE PROCESOS
ción. Para iniciar, se deben plantear tres pre-
guntas: ¿Cuál es la cultura requerida para mi La orientación hacia los procesos forma parte
organización?, ¿Cuáles son los rasgos de la de la cultura de las organizaciones exitosas.
cultura actual? y ¿Cuáles son las brechas en- La gerencia de procesos se fundamenta en
tre la cultura actual y la deseada? La respues- que sólo aquel que conoce el trabajo es quien
ta a estos interrogantes permite definir un plan puede gerenciarlo (independientemente del
para cerrar las brechas entcontradas, es decir, nivel jerárquico), es decir, las personas pue-
modelar la cultura. Esto significa que se vali- den aportar sus conocimientos, experiencias
dan los principios y valores individuales de la y habilidades, trabajando en equipo, estudian-
persona, de la sociedad y de la organización. do y aplicando las herramientas básicas de
control y mejoramiento a sus procesos de tra-
Los elementos que integran la cultura son las bajo.
creencias, las normas, los sistemas y proce-
sos. Los valores sobre los cuales se crea cul-
tura son, entre otros: IDENTIFICACIÓN DE LOS PROCESOS

• Valores sobre el ser humano en la organi- La misión y la visión son la base para la iden-
zación. tificación de los procesos que se deben desa-
• Estado de ánimo que desea mantener la rrollar en el servicio de urgencias.
organización (confianza, seguridad en sí
mismo, actitud positiva). Mapa de procesos: es una visión panorámi-
• La condición humana (cómo es la gente ca de los procesos; se construye analizando
que se vincula, rasgos de personalidad y cómo se maneja el paciente desde que entra
carácter). hasta que sale en sus interacciones con el

1407
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

hospital. Se dibuja en un diagrama de flujo principales), subprocesos, quienes intervienen


(Figura 2). y la interrelación entre ellos. En la tabla 1 se
presentan los procesos principales y los
El mapa de procesos permite mostrar los subprocesos del servicio de urgencias:
megaprocesos o macroprocesos (procesos

TABLA 1. MEGAPROCESOS DE URGENCIAS

• Procesos gerenciales Direccionamiento estratégico (plan de acción).


Manejo de las relaciones externas (EPS, otros hospitales).
Transformación de la cultura organizacional.
• Procesos de apoyo Atención médica y de enfermería a paciente ambulatorio.
Reanimación y atención de trauma.
Observación.
Hospitalización.
• Procesos operativos Estudios diagnósticos.
Desarrollo del talento humano.
Sistema de información.
Gestión ambiental.
Sistema financiero.
Recursos físicos y tecnología; suministros y medicamentos.

MODELO PARA LA GERENCIA ner los resultados. Si los resultados no son


DE PROCESOS satisfactorios se debe pensar en mejorar
el proceso.
Consiste en definir un plan de acción enfoca- • Mejoramiento de procesos: es la búsque-
do al mejoramiento de los procesos y, bajo la da por hacer las cosas mejor de lo que se
dirección de un gerente, llevar el equipo huma- hacen para obtener superiores resultados.
no a que logre las metas establecidas. El rol El mejoramiento se puede hacer a escala
principal del gerente es proveer los medios y pequeña (mejoramiento continuo) que re-
la autoridad a las personas que operan el pro- sulta del esfuerzo de la gente por entender
ceso para que den los resultados esperados. y mejorar un proceso, como resultado de
analizar lo que se hace y la manera como
• Control de procesos: significa mantener se hace. También se puede hacer a gran
el estado actual. En este caso la gestión escala mediante innovación (inversión en
consiste en cumplir los estándares, proce- bienes de capital, tecnología, etc.). En la
dimientos o protocolos establecidos para perspectiva del tiempo el mejoramiento es
el proceso y la atención en salud. Se de- algo permanente.
tectan las desviaciones esporádicas, ano- • Ciclo de mejoramiento PEEA: es una téc-
malías y no conformidades que se presen- nica reconocida para el mejoramiento cons-
tan para identificar las causas y establecer tante. Se representa de manera circular
las medidas correctivas que permitan res- para mostrar el cumplimiento de etapas;
tablecer la estabilidad del proceso y obte- tiene inicio pero no tiene fin (Figura 3).

1408
CAPÍTULO VIII: GERENCIA DE LA ATENCIÓN DEL PACIENTE EN EL SERVICIO DE URGENCIAS DE UN HOSPITAL DE TERCER NIVEL

SECUENCIA RESPONSABLE DESCRIPCIÓN DE ACTIVIDADES

Paciente 1. Ingresa por diferentes medios de llegada al servicio de


Urgencias. El personal de seguridad orienta al paciente
para que sea valorado en el triage. Si no puede caminar,
saca silla o camilla e informa a la enfermera del triage.

Enfermera 2. Valora el estado del paciente.

3. ¿El estado del paciente es una “Emergencia” (Prioridad


I)?

Paciente/ Personal 4. SI. Pasa a la actividad Nº 7.


Asistencial La enfermera del triage ingresa inmediatamente el pa-
ciente para que sea atendido e informa a la oficina de
admisiones.

Representante de 5. NO. El paciente en estado de “Urgencia” o “No agudo”


admisiones (triage II o III) se envía a admisiones para su registro.
Verifica los documentos para establecer el tipo de paga-
dor por el cual ingresa el paciente (comprobación de
derechos).

El paciente 6. Espera en la sala de espera a que sea llamado para la


atención médica. Si los recursos humanos y físicos es-
tán disponibles el tiempo de espera se reduce.

Médico, Enfermera y 7. Valoración clínica y manejo del paciente.


Auxiliar de Enfermería
8. ¿Después de la valoración médica y el manejo inicial del
paciente se puede definir la conducta médica?

Médico 9. SI. Alta del paciente. Pasa a actividad Nº 14.

1409
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

SECUENCIA RESPONSABLE DESCRIPCIÓN DE ACTIVIDADES

Médico, Enfermera, 10. Realización de estudios diagnósticos (laboratorio clí-


Aux. de Enfermería y nico, radiología), interconsultas, observación y tra-
servicios de apoyo. tamientos médicos y quirúrgicos.

Médico 11. Determina la condición del paciente y define la con-


ducta:
• Alta
• Hospitalización
• Remisión

12. ¿El paciente debe ser hospitalizado o remitido?

Médico, Enfermería y 13. SI. Se diligencia la orden de admisión o se realiza


Personal la ubicación del paciente en otro centro asistencial
administrativo. (siguiendo los procedimientos establecidos).

Médico 14. NO. Diligenciar soportes de la historia clínica e in-


formar la salida al personal de enfermería para ha-
cer el trámite de salida.

Facturador y cajero. 15. Realiza liquidación y cobro.

Jefatura y personal 16. Evaluación de los servicios prestados, recepción de


asistencial. sugerencias y solución de quejas, mediante segui-
miento telefónico a la casa del paciente o aplica-
ción de encuesta.

1410
CAPÍTULO VIII: GERENCIA DE LA ATENCIÓN DEL PACIENTE EN EL SERVICIO DE URGENCIAS DE UN HOSPITAL DE TERCER NIVEL

4. SISTEMA DE MONITORIZACIÓN
ESTRATÉGICA DE LA ATENCIÓN

Actuar Planear El monitoreo de la calidad de la atención de


urgencias se realiza a través de indicadores
de gestión. Se deben identificar los indicado-
res relevantes que apoyan la toma de deci-
siones fundamentales en la satisfacción de los
Estudiar Ejecutar
usuarios, la innovación en los servicios y la
supervivencia del Departamento de Urgen-
cias. Esto permite enfocar los esfuerzos a re-
copilar información útil y no tener gran canti-
dad de datos que no se alcanzan a analizar y,
mucho menos, a aplicar en el mejoramiento
de procesos.
Figura 3. Ciclo PEEA.

Comprende la capacitación y compromiso de


personas y grupos de apoyo para realizar el
control de los procesos y proyectos de mejo-
Planear: definir la meta a alcanzar y el plan ramiento de procesos. Estos grupos son: cír-
de acción. culos de calidad, grupo de mejoramiento, co-
mités ad hoc, comité de ética, comité de audi-
Ejecutar: capacitar el equipo humano. Imple- toría clínica (por pares y compartida), entre
mentar el cambio en una prueba piloto. otros. Esta estrategia facilita la autoevaluación
y permite el control interno de la calidad.
Estudiar: examinar los resultados de los cam-
bios introducidos. Medir a través de indica-
dores. INDICADORES

Actuar: adoptar el cambio si los resultados son Miden o indican el nivel de desempeño de un
satisfactorios o, de lo contrario, abandonar el proceso. La gerencia de la unidad de urgen-
cambio y hacer otras revisiones. cias debe realizarse con base en hechos y
resultados; fomentar la cultura de evaluar con
Calidad individual para el trabajo diario: el información objetiva y confiable. Los indica-
esquema de gestión por procesos implica un dores permiten:
cambio en la manera como se asume el traba-
jo en la organización. Además de practicar el • Evaluar el desempeño de un proceso (lo-
trabajo en equipo, cada persona debe trans- gro de metas en relación con los resulta-
formar sus hábitos personales; orientarse a dos).
un mejor comportamiento que lo beneficia, es- • Establecer si un proceso es estable o no
pecialmente, en su vida privada. Se debe moti- (las causas de las desviaciones en el re-
var en el agente de salud un ambiente de eco- sultado son comunes o especiales).
nomía, organización, limpieza, salud y disci- • Fijar el nivel de desempeño deseado con
plina en el trabajo diario. base en el desempeño alcanzado o el dato
de referencia de otra organización.

1411
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Mostrar tendencias y proveer señales de TIPOS DE INDICADORES


precaución.
• Detectar problemas u oportunidades de • De procesos: miden la variación en el pro-
mejoramiento. ceso mediante la medición de las activida-
• Evaluar medidas correctivas. des. Cuando se ha documentado un pro-
• Facilitar la comunicación. ceso, en el diagrama de flujo se pueden
establecer puntos de control. Si se cuenta
Un indicador debe tener tres características: con la premisa de que la calidad de constru-
poderse medir (frecuencia, grado, cantidad), ye, los indicadores de procesos son de gran
tener significado (definición y qué pretende importancia, puesto que permiten identifi-
medir) y poderse controlar (el factor se puede car las desviaciones durante el proceso de
modificar). prestación del servicio.
• De resultados: miden la conformidad o no
conformidad del desenlace de un proceso,
es decir, el servicio de salud con los re-
querimientos del paciente.

TABLA 2. INDICADORES DE LA ATENCIÓN EN URGENCIAS

PROCESO / RESULTADO DEFINICIÓN


• Demanda no atendida Nº pacientes no atendidos / Total demanda de servicios.
• Oportunidad en la atención Tiempo promedio en minutos de espera para la consulta médica según el
nivel de triage.
• Estancia en urgencias Tiempo promedio en horas de estancia en urgencias.
• Reingresos Tasa de reingreso.
Causa de reingreso (persistencia de síntomas, control, patología nueva y
complicación).
• Complicaciones Tasa de complicaciones.
• Incidentes en la atención Nº de incidentes en la atención.
Tipo de incidentes ocurridos.
• Nivel de satisfacción del paciente Porcentaje de satisfacción del paciente con la atención médica.
Porcentaje de satisfacción del paciente con la atención de enfermería.
Porcentaje de satisfacción del paciente con el trámite de ingreso.
Porcentaje de satisfacción del paciente con el trámite de salida.
• Perfil del usuario Distribución de pacientes atendidos por grupo etáreo y sexo.
Distribución de urgencias por diagnóstico de egreso.
Distribución de pacientes atendidos según el régimen de afiliación al
sistema de salud.
• Rentabilidad económica Margen de contribución de urgencias.
Valor de la glosa.
Porcentaje de facturas devueltas.
• Calidad de la historia clínica Porcentaje de registros con calificación excelente.
• Uso de guías de práctica clínica Porcentaje de adhesión a las guías de práctica Clínica.

1412
CAPÍTULO VIII: GERENCIA DE LA ATENCIÓN DEL PACIENTE EN EL SERVICIO DE URGENCIAS DE UN HOSPITAL DE TERCER NIVEL

ADMINISTRACIÓN DE LA INFORMACIÓN LECTURAS RECOMENDADAS

• Retroalimentación del equipo de traba- 1. Arrázola P. Calidad en medio de la escasez. Vía


jo: los resultados de los indicadores deben Salud 2001; 15:16-22.
ser conocidos por el equipo de trabajo de 2. Arrázola P. Una institución con el diálogo en la
piel: el caso del centro dermatológico Federico
manera individual y colectiva. Cuando el
Lleras Acosta. Vía Salud 2001; 15:24-30.
indicador responde a la meta esperada, se 3. Camacho M. Buena voluntad y logros: el caso del
constituye en motivo de reconocimiento a hospital Pablo Tobón Uribe. Vía Salud 2000; 12:16-
la labor realizada. Si, por el contrario, el 23.
indicador muestra un resultado negativo, 4. Centro de Gestión Hospitalaria. Consideraciones
ofrece una oportunidad de mejoramiento y y definiciones para un sistema de garantía de ca-
el equipo de trabajo participa activamente lidad en Colombia. Vía Salud 2000; 12:6-12.
en plantear soluciones. 5. De Brigard A. Urgencias una verdadera encruci-
jada. Revista Hospitalaria 2001; 20: 4-7.
6. Donabedian A. La Calidad de la Atención Médica.
• Informes: los resultados consolidados en La Prensa Mexicana SA de CV. México DF, 1984.
un informe presentan una visión global del 7. Durán E. Gestión de Enfermería en la Fundación
desempeño. Es una forma de mostrar el Santa Fe de Bogotá durante 1999: operacionali-
Departamento al interior de urgencias, de zación del direccionameinto estratégico. Actual
la institución y, externamente, dar a cono- Enferm 2000; 3:29-38.
cer los servicios y referenciarlos. 8. Mariño H. Gerencia de Procesos. Primera edición.
Alfaomega Colombiana SA. Bogotá, 2001.
9. Gilmore CM, De Moraes H. Manual de Gerencia
• Tablero de indicadores: es un método de
de la Calidad. Organización Panamericana de la
administración visual de la información, va- Salud (OPS). Washington, 1996.
lioso para dar a conocer los resultados de 10. Patiño JF, Comisión de Salud. Ley 100 de 1993:
la gestión a los colaboradores y los pacien- Reforma y Crisis de la Salud. Academia Nacional
tes; ofrece una imagen de un Departamen- de Medicina. Bogotá, 1999.
to de Urgencias comprometido con la cali- 11. Sanz J. Organización y gestión de los servicios
dad, puesto que es información al público. de enfermería. Centro de Gestión Hospitalaria.
1998; 3:23-27.
12. Sánchez C, Maya M, Obregón P. Guía de inter-
vención en enfermería basada en la evidencia
científica: gerencia de los servicios de enfermería.
Instituto del Seguro Social y Asociación Colom-
biana de Facultades de Enfermería. Bogotá, 1998.
13. Velandia M. Gerencia del día a día en el Departa-
mento de Urgencias de la Fundación Santa Fe de
Bogotá. Actual Enferm 2000; 3:20-26.
14. Velandia M. Planeación estratégica para el De-
partamento de Urgencias año 2000. Fundación
Santa Fe de Bogotá. Bogotá, 2000.

1413
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO IX

Manejo inicial de enfermería del paciente


politraumatizado

Esperanza Guasca Caicedo, Enf.


Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

E l paciente politraumatizado constituye hoy


un grave problema de salud pública, da-
dos los altos índices de lesiones por la violen-
La enfermera del servicio de urgencias debe
asumir un papel líder en la atención del pa-
ciente con trauma múltiple y trabajar en coor-
cia que vive Colombia. Desde el punto de vis- dinación con médicos, auxiliares de enferme-
ta epidemiológico, el trauma múltiple también ría, terapistas respiratorias y demás integran-
resulta de los accidentes automovilísticos e tes del equipo de salud presente en el medio
industriales. En los países desarrollados, és- hospitalario.
tos son la causa principal de trauma.

El alto costo biológico y económico que ge- EPIDEMIOLOGÍA


nera la atención del trauma, no solamente en
el tratamiento del estado agudo sino en la re- Las lesiones resultantes de la violencia inter-
habilitación, obliga a un manejo inicial coordi- personal afectan la salud de miles de colom-
nado y disciplinado por parte del equipo de bianos. Mientras la naturaleza criminal de este
salud, tanto en la fase prehospitalaria como problema social ha sido denunciada y exami-
en el nivel hospitalario. nada, solo recientemente han ganado aten-
ción las enormes implicaciones que tiene la
Los primeros 30 minutos son fundamentales violencia para la salud pública.
para la toma de decisiones: pueden significar
la diferencia entre la vida y la muerte y entre Cada año fallecen en Colombia más de 30.000
una calidad de vida aceptable o incapacitante. personas como resultado de la violencia inter-
Por lo tanto, se debe contar con un equipo personal, homicidios y accidentes de tránsito.
interdisciplinario idóneo para la atención in- La tasa más alta, tal vez sin par en el mundo,
mediata y eficaz. Además, con un plan de es la de homicidios; sin embargo, se encuen-
emergencia que permita atender en forma tra en descenso desde 1994 y en 1998 se
ordenada y expedita un alto volumen de pa- observó la tasa más baja (54 por 100.000 ha-
cientes con trauma múltiple secundario a de- bitantes) de la década de los noventa. La tasa
sastres naturales o desastres ocasionados por de muerte por accidente de tránsito es 19 por
el hombre, como son las bombas y los aten- 100.000 habitantes.
tados terroristas.

1414
CAPÍTULO IX: MANEJO INICIAL DE ENFERMERÍA DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

Los homicidios por arma de fuego y por arma 1. El primer pico en la tasa de mortalidad ocu-
cortopunzante se ubican en el primero y segun- rre en el mismo momento del accidente
do lugar, respectivamente, en los grupos de 15 debido a lesiones graves que afectan uno
a 44 años, siendo 7 veces mayor el número de o más órganos vitales; son muertes inevi-
homicidios por arma de fuego. Del total de tables.
muertes violentas registradas en 1998, 30% 2. El segundo pico en la tasa de mortalidad
correspondió a jóvenes entre 15 y 24 años y ocurre el periodo de tiempo que va desde
28% al grupo entre 25 y 34 años. La gran mayo- minutos hasta pocas horas después del ac-
ría de las víctimas (88%) pertenecía al género cidente. La actuación durante este periodo
masculino, encontrándose que por cada 7 hom- prehospitalario, o sea, la llegada de las am-
bres fallecidos violentamente muere una mujer. bulancias, las medidas de soporte vital bá-
sico, la prevención de lesiones derivadas
En 1998 se registraron 52.965 personas le- de la manipulación del accidentado, debe
sionadas por accidentes de tránsito. En los ser rápida y eficaz. Esto corresponde tan-
accidentes de tránsito, por cada 7 personas to al personal que acude en primer térmi-
lesionadas hubo una persona fallecida. no, como al personal médico y paramédico
que se encarga de la asistencia prehospi-
Entre los indicadores de salud, la muerte pre- talaria y al personal del centro de atención
matura medida a través de los años de vida hospitalaria receptora. Muchas de las
potencialmente perdidos (AVPP) presenta un muertes que se producen en este período
descenso progresivo entre 1994 y 1998. En de tiempo son prevenibles; una actuación
1998 se perdieron 1.320.443 AVPP; la mayor rápida y adecuada en este periodo puede
proporción correspondió a homicidios, segui- disminuir, en forma sustancial, la mortali-
da de muertes por accidente de tránsito. A di- dad y la morbilidad derivadas de los
ferencia de los AVPP, los años de vida saluda- traumatismos graves.
ble (AVISA) registraron un incremento de 7% 3. El tercer pico en la tasa de mortalidad se
(19.061 AVISA). El mayor número de AVISA se produce en el hospital trascurridos días o
perdió en el grupo de los 25 a los 34 años. inclusive semanas después del accidente.
Las muertes se deben a complicaciones
El ausentismo laboral por trauma es enorme, sistémicas postraumáticas o posquirúrgi-
y paralelamente se debe calcular el alto costo cas. Pero aquí también una actuación ini-
de las pensiones por invalidez definitiva y la cial adecuada, oportuna y eficaz, por per-
incapacidad temporal de sujetos jóvenes. El sonal idóneo, puede contribuir a la dismi-
costo de atención de estas personas es muy nución de la mortalidad y morbilidad.
elevado, con un gran impacto económico para
los sistemas asistenciales tanto estatales La organización inicial de la asistencia del
como privados, además del daño social y eco- paciente politraumatizado supone:
nómico que produce en las familias afectadas.
1. Una evaluación rápida (triage de campo)
para definir el lugar de traslado, teniendo
ATENCIÓN PREHOSPITALARIA en cuenta que no siempre el lugar más ade-
cuado es el más cercano, sino más bien
La mortalidad por politraumatismo presenta aquel que cuenta con los recursos para
tres momentos de suma importancia en el pro- atender al paciente de acuerdo con la com-
ceso de la toma de decisiones: plejidad de sus lesiones.

1415
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

2. Soporte vital básico (respiratorio, accesos A: Vía aérea con protección de la columna cer-
venosos, inmovilización de la columna). vical.
3. Información completa por radio sobre el B: Ventilación y respiración (breathing).
estado del paciente, signos vitales, estado C: Circulación y control de hemorragias.
de conciencia, procedimientos realizados, D: Déficit neurológico.
a fin de preparar la sala de trauma y el re- E: Exposición.
curso humano pertinentes para recibir el
paciente. A. Vía aérea con protección de la columna
cervical
Antes de cualquiera otra acción, se debe ase-
ATENCIÓN DE ENFERMERÍA gurar la vía aérea, controlando la columna cer-
vical (“todo paciente que ingresa con trauma
La atención de enfermería en el servicio de múltiple tiene lesión de la columna cervical
urgencias está orientada al cuidado rápido y hasta que se demuestre lo contrario”). Hay que
apropiado durante la reanimación inicial y la buscar signos de obstrucción de la vía aérea
estabilización del paciente politraumatizado. ocasionados por cuerpos extraños, fracturas
Esta guía está basada en las recomendacio- de mandíbula o de huesos faciales, lesión de
nes del Comité de Trauma del Colegio Ameri- tráquea o de laringe, vómito o sangre.
cano de Cirujanos en su programa Avanzado
de Apoyo Vital en Trauma (ATLS). Signos y síntomas: disnea, respiración laborio-
sa, cianosis, traumatismos de cara o cuello,
Los cuidados del paciente politraumatizado ansiedad, pánico, ausencia de murmullo vesi-
comienzan con la evaluación primaria que in- cular, incapacidad para hablar, diaforesis,
cluye la vía aérea, con las precauciones debi- taquicardia.
das en cuanto a la columna cervical, la respira-
ción, la circulación y un breve examen neuro- DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA
lógico. Una vez completada la valoración pri- • Respiración ineficaz: visible uso de los
maria, se desnuda el paciente, se le cubre pa- músculos accesorios de la respiración, por
ra mantener la temperatura corporal y se rea- obstrucción de la vía aérea o edema.
liza una determinación detallada de los signos • Alteración en el intercambio gaseoso: cia-
vitales. Por último, se lleva a cabo una evalua- nosis y disnea por obstrucción de la vía
ción secundaria más detallada, de la cabeza aérea.
a los pies, para identificar posibles lesiones;
estas evaluaciones se deben realizar en for- ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA:
ma simultánea. 1. Apertura de la vía aérea mediante eleva-
ción del mentón por tracción de la mandí-
bula, sin hiperextensión del cuello; retirar
REVISIÓN PRIMARIA cuerpos extraños y aspirar secreciones,
vómito y sangre.
El objetivo de la valoración primaria es la iden- 2. Inmovilización del cuello con un collar rígido.
tificación de lesiones que amenazan la vida 3. Oxigenación a concentraciones altas me-
del paciente e iniciar el manejo de acuerdo diante un dispositivo de bolsa y válvula
con el ABCDE del trauma, según el Manual (100%) o con máscara de Venturi (50%).
ATLS del Colegio Americano de Cirujanos: 4. Monitoría de la función respiratoria por me-
dio de la saturación percutánea aseguran-

1416
CAPÍTULO IX: MANEJO INICIAL DE ENFERMERÍA DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

do la FiO2 necesaria para mantener la sa- afectada), dolor severo, disnea, disminución
turación en 90% ó más. de la expansibilidad pulmonar, respiración rá-
5. Asistir al médico durante la intubación en- pida y superficial, cianosis.
dotraqueal o, si es el caso, la realización
de cricotiroidotomía. Neumotórax abierto: lo produce una herida en
6. Verificación de la permeabilidad de las fo- el pecho, y se caracteriza por la salida de bur-
sas nasales en los niños menores de 12 bujas que indican lesión pulmonar.
meses de edad, que son respiradores na-
sales obligatorios. DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA:
7. Evaluación frecuente de la respiración en • Alteración del intercambio gaseoso.
niños pequeños (en quienes se utiliza la • Alteración de la ventilación: hipoventilación
sonda endotraqueal sin manguito) por el alveolar, relacionada con obstrucción me-
riesgo de desplazamiento o desalojo. cánica, lesión de estructura anatómica (le-
sión de médula cervical, hemo-neumotórax,
B. Ventilación y respiración (breathing) tórax inestable, contusión pulmonar).
Asegurar una vía aérea permeable es el pri- • Déficit de la oxigenación tisular, relaciona-
mer paso para una correcta ventilación. Si la do con aumento de la demanda de oxíge-
respiración no mejora después de despejar la no y disminución del aporte.
vía aérea, se deben buscar otras causas: un
trauma torácico directo (fracturas costales) ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA:
causa dolor y provoca hipoventilación e hipo- 1. Exposición del pecho del paciente e ins-
xemia; el traumatismo craneano puede pro- pección de los movimientos respiratorios;
vocar patrones respiratorios anómalos y com- determinar la frecuencia respiratoria.
prometer la ventilación, y una lesión medular 2. Verificar la permeabilidad de la vía aérea.
alta provoca respiración abdominal y paráli- 3. Si no hay respiración espontánea, realizar
sis de los músculos intercostales. En pacien- la reanimación básica y avanzada. Asistir
tes con trauma torácico se deben identificar al médico en la intubación endotraqueal.
en forma prioritaria el neumotórax, la contu- 4. Si hay repiración espontánea, oxigenación
sión pulmonar y el hemotórax, porque ponen a concentraciones altas con un dispositivo
en inminente riesgo la vida del paciente. de bolsa y válvula (100%) o con máscara
Venturi (50%).
Neumotórax a tensión: el mecanismo que lo 5. Búsqueda de signos de neumotórax a ten-
ocasiona es el trauma directo. Los signos y sión, tórax inestable, neumotórax abierto.
síntomas son ausencia del murmullo vesicular 6. Asistir al médico en la colocación de un
del lado afectado, hiperresonancia, dificultad tubo de tórax.
respiratoria, cianosis, aleteo nasal, taquicar- 7. Monitoría permanente del patrón respiratorio.
dia, hipotensión, sudoración, ingurgitación de 8. Cubrir la herida torácica con una gasa es-
venas yugulares, enfisema subcutáneo y des- téril, sólo en tres extremos; el extremo li-
viación de la tráquea hacia el lado no afectado. bre permite la presión negativa y evita
neumotórax a tensión.
Tórax inestable: resulta de la fractura de cua-
tro o más costillas en un mismo hemitórax y C. Circulación y control de la hemorragia
se manifiesta por asimetría y movimiento no El diagnóstico inicial de shock es clínico y se
coordinado durante la respiración (movimien- basa en la evaluación de la perfusión de los
to paradójico de la zona de la pared torácica órganos y de la oxigenación tisular. El shock

1417
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

representa la manifestación más importante del lia grasa o, más raramente, infartos miocár-
compromiso circulatorio: al disminuir aguda- dicos asociados con el trauma. El diagnós-
mente el volumen sanguíneo, la primera res- tico de taponamiento cardiaco lo sugieren
puesta del organismo a la pérdida hemática es signos como taquicardia, disminución de
la vasoconstricción periférica para preservar el los sonidos cardíacos e ingurgitación de las
flujo sanguíneo al cerebro, corazón y riñones. venas del cuello en un paciente hipotenso
que no responde a la reposición de líquidos.
En las situaciones no complicadas hay una 2. Neumotórax a tensión: es una urgencia qui-
respuesta gradual a la hemorragia que per- rúrgica que se resuelve con toracostomía
mite clasificar a los pacientes politraumati- inmediata.
zados en cuatro grupos diferentes, según las 3. Shock neurogénico: sucede en pacientes
pérdidas sanguíneas, los signos vitales, la diu- con lesiones de la médula espinal; el signo
resis horaria y el estado mental (Tabla1). clásico de este tipo de shock es la presen-
cia de hipotensión sin taquicardia.
Las causas del shock no hemorrágico que
deben descartarse son: Signos y síntomas: punto sangrante eviden-
te, taquicardia, pulsos débiles, piel fría y páli-
1. Shock cardiogénico: resultado de una dis- da, diaforesis, taquipnea, alteración del esta-
función miocárdica secundaria a trauma do de conciencia, retraso del llenado capilar,
miocárdico, taponamiento cardiaco, embo- oliguria o anuria.

TABLA 1. ESTADOS DE SHOCK SEGÚN LAS PÉRDIDAS SANGUÍNEAS

Pérdidas de FC por FR por TA Diuresis(ml) Signos / Estado Volumen


sangre (%) minuto minuto Sistólica síntomas mental administrado
10 - 15 < 100 14 - 20 Normal 50 Hipotensión Ansiedad Cristaloides
postural ligera hasta 2000 mL
15 - 30 101 – 119 21 - 30 Descenso 30 Taquicardia, Ansiedad Cristaloides
moderado sed y moderada hasta 6000 mL
debilidad
30 - 40 120 – 139 31 - 40 60 – 80 5 - 10 Palidez, Ansiedad Cristaloides /
oliguria y severa y sangre
confusión confusión
> 40 > 140 > 40 40 - 60 0 Anuria, Letargia Cristaloides /
coma, sangre
muerte

1418
CAPÍTULO IX: MANEJO INICIAL DE ENFERMERÍA DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA: 4. Administración de soluciones cristaloides,


• Riesgo potencial de disminución de la per- como lactato de Ringer, que es una solu-
fusión tisular, cerebral, cardiaca, pulmonar, ción isotónica con similar composición a la
renal, relacionado con traumatismo o com- del líquido extracelular. La dosis inicial es
presión de vasos sanguíneos, hipotensión de 2.000 ml en bolo en un adulto.
y respuesta simpática por estrés (vaso- 5. Recolección de muestras de sangre para
constricción). hemoclasificación y reserva, hemoglobina
• Riesgo de disminución del gasto cardiaco y hematocrito; además, se deben dejar en
por disminución de la precarga secundaria reserva muestras para el caso en que el
a hemorragia. paciente tenga antecedentes de enferme-
• Riesgo potencial de hipotermia, por dismi- dad asociada que empeora su situación ac-
nución de la perfusión tisular y las medi- tual. Se sugiere que las muestras sean to-
das de reanimación. madas después de iniciar la reposición de
líquidos endovenosos.
ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA: 6. En caso de hemorragia externa, aplicar pre-
1. Evaluación del paciente: estado de con- sión directa sobre el sitio sangrante con una
ciencia, llenado capilar, coloración de la piel compresa estéril o un vendaje compresivo.
y la temperatura corporal. 7. Evaluación de signos de taponamiento car-
2. Conservación de la temperatura corporal y diaco, como hipotensión, ingurgitación yu-
evitar hipotermia por exposición prolonga- gular, disminución de los ruidos cardiacos,
da. En lo posible, colocar cobijas térmicas, y preparar el equipo y asistir al médico du-
administrar líquidos endovenosos y sangre rante la pericardiocentesis o procedimien-
calientes (a la temperatura corporal, 37º C). to de ventana pericárdica.
Un método adecuado es calentar las solu- 8. Inserción de sonda vesical Nº 16 o 18 para
ciones cristaloides en un horno microondas monitoría del estado de la volemia, previa
durante algunos segundos, de la siguiente evaluación de las contraindicaciones del
manera: bolsa de lactato de Ringer o solu- procedimiento, tales como, sangrado ge-
ción salina normal de 1.000 mL durante 1 nital o trauma pélvico. La diuresis del adul-
minuto y 33 segundos; bolsa de lactato de to debe ser no menos de 30-50 mL/hora y
Ringer o solución salina normal de 500 mL de 1 mL/kg / hora en el paciente pediátrico.
durante 52 segundos y bolsa de solución 9. La reposición de líquidos en los niños se
salina normal de 250 mL durante 30 se- realiza de la siguiente manera:
gundos, para mezclar con la sangre (estos • 20 mL/kg de cristaloides en goteo intra-
tiempos deben ser estandarizados por per- venoso rápido; si no hay respuesta, re-
sonal especializado en cada hospital y ve- petir un bolo de 20 mL/kg de una solu-
rificados periódicamente). ción cristaloide isotónica en goteo
3. Canalización de dos venas de calibre grue- endovenoso.
so, como mínimo, preferiblemente que no • Para la transfusión en niños, adminis-
sea en pliegues, con catéter periférico No. trar 10 mL/kg de glóbulos rojos concen-
14 a 16 para un paciente adulto y 20 a 24 trados.
en niños menores. En casos de canaliza-
ción difícil, asistir al médico en el acceso D. Déficit neurológico
intraóseo (en niños menores de cinco años) La evaluación inicial del estado de conciencia
o acceso a la vena por venodisección. comienza en el momento con la recepción del
paciente en la sala de trauma, por medio del

1419
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

diálogo con el paciente y de los diferentes pro- tomar medidas para preservar el calor corpo-
cedimientos que pueden producirle dolor; pos- ral que incluyen cobijas calientes, líquidos
terior al ABC, se comprueba el estado de las endovenosos tibios y aumento la temperatu-
pupilas y se determina el grado de compromi- ra de la sala de trauma (si dispone de aire
so neurológico. acondicionado).

DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA: DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA:


• Alteración de la eliminación urinaria rela- • Riesgo de alteración de la temperatura
cionada con vejiga neurogénica. corporal relacionado con exposición pro-
• Riesgo potencial de alteración de la termo- longada al medio ambiente.
rregulación, secundario a trauma de la
médula espinal. ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA:
• Dolor relacionado con estimulación de las 1. Desnudar totalmente el paciente. En gene-
terminaciones nerviosas. ral es preferible retirar la ropa cortándola.
• Riesgo potencial de lesión de la integridad No exponer innecesariamente a la persona.
de la piel relacionado con inmovilidad se- 2. Administración de líquidos tibios.
cundaria a parálisis y déficit de la perfu- 3. Evitar mantener el paciente húmedo con
sión tisular. secreciones o sangre.
• Alteración del patrón cognoscitivo-percep-
tual relacionado con aumento de la presión
intracraneana secundario a trauma craneo- REVISIÓN SECUNDARIA
encefálico, trauma medular o cervical.
Una vez realizada la revisión primaria, y con-
ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA: trolados los parámetros del ABC, se efectúa
1. La primera revisión neurológica permite un examen completo para evaluar todos los
establecer la severidad de la lesión por sistemas en forma ordenada en un corto pe-
medio de la escala de coma de Glasgow riodo de tiempo.
en adultos, y de la escala de coma de Glas-
gow modificada en la población pediátrica. Durante la revisión secundaria se reevalúa el
2. Mantenimiento lineal de la médula espinal ABC, se completan la anamnesis, el examen
por medio de la tabla para inmovilización físico y los estudios diagnósticos que estén
espinal. indicados.
3. Oxigenación a concentraciones altas con
un dispositivo de bolsa y válvula (100%) o Anamnesis: se debe interrogar al paciente
con máscara de Venturi (50%). nuevamente, si su estado lo permite, o a sus
4. Administración de analgésicos según indi- familiares o al personal que prestó la aten-
cación médica. ción prehospitalaria, para conocer los even-
tos relacionados con el mecanismo del trau-
E. Exposición evitando la hipotermia ma, el estado inicial luego de ocurrido el trau-
Se expone el paciente retirando toda la ropa; ma y los antecedentes personales; se utiliza
en ocasiones es necesario cortarla. Se des- la nemotecnia AMPLIE sugerida por el Cole-
nuda al paciente para identificar rápidamente gio Americano de Cirujanos: A alergia a medi-
las lesiones, pero luego se lo debe cubrir para camentos; M medicamentos que ha recibido
evitar la hipotermia, que en el politraumatizado y que toma en forma rutinaria; P patológicos
es común y tiene efectos nocivos. Se deben (enfermedades concurrentes que pueden

1420
CAPÍTULO IX: MANEJO INICIAL DE ENFERMERÍA DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

comprometer o complicar el estado del pacien- 8. Evaluación neurológica de acuerdo con la


te); Li libaciones y última ingesta; y E eventos escala de coma de Glasgow.
intervencionistas (operaciones anteriores al
trauma, diálisis). DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA:
1. Riesgo de alteración del intercambio ga-
Examen de cabeza a pies: consiste en una seoso relacionado con obstrucción de la vía
valoración detallada y sistemática de todo el aérea baja por retención de secreciones.
cuerpo, incluye auscultación, inspección, pal- 2. Riesgo de infección relacionado con obje-
pación y percusión. tos empalados en la pared torácica, pared
abdominal, extremidades.
1. Cabeza y cuello: examinar la cabeza en 3. Riesgo de alteración del volumen sanguí-
busca de heridas evidentes, hemorragias neo relacionado con hemorragia conteni-
externas, deformidades, elementos empa- da en extremidades, sangrado interno ab-
lados o drenaje nasal o auricular. En el dominal o pélvico.
cuello, observar heridas evidentes, hemo- 4. Alteración del patrón de la actividad física.
rragias externas, distensión de las venas
yugulares, posición de la tráquea. ACTIVIDADES DE ENFERMERÍA:
2. Tórax: inspección de heridas que aspiran,
movimientos respiratorios, hemorragia ex- La actuación de la enfermera en el equipo de
terna, enfisema subcutáneo. salud debe ser complementaria con las de-
3. Abdomen: signos de traumatismo eviden- más especialidades que manejan el paciente
te, hemorragia externa y objetos empala- con trauma múltiple.
dos. La rigidez, la distensión y el dolor son
signos de posibles lesiones internas y de 1. Valoración permanente del estado de con-
hemorragia activa. ciencia del paciente.
4. Pelvis: signos de traumatismos óseo y de 2. Monitoría de los signos vitales: frecuencia
tejidos blandos, inestabilidad de la pelvis cardiaca, frecuencia respiratoria y satura-
que evidencia fractura. ción de oxígeno, temperatura corporal y
5. Genitourinario: hemorragia externa, objetos tensión arterial.
empalados, sangre en el meato uretral, he- 3. Inserción de sonda nasogástrica Nº 18 para
morragia vaginal o hematoma escrotal. En descomprimir el estómago y disminuir el ries-
toda mujer se debe realizar examen vaginal go de broncoaspiración. La inserción de una
para descartar lesiones internas. sonda por vía nasal está contraindicada en
6. Extremidades: signos de traumatismo evi- lactantes, que respiran en forma obligatoria
dentes, hemorragia externa, objetos empa- por la nariz; en este caso se utiliza la vía
lados o deformidades; se determina el tiem- orogástrica. También se contraindica en pre-
po de llenado capilar y se determina la pre- sencia de traumatismo craneal o facial (le-
sencia y calidad de los pulsos, los cuales sión maxilofacial o fractura de la fosa ante-
deben ser iguales en ambas extremidades. rior del cráneo) por el riesgo de penetración
7. Espalda: debe girarse el paciente en blo- inadvertida al encéfalo a través de la placa
que para evaluar la columna en busca de cribiforme o del hueso etmoides; en estos
dolor o deformidad, los glúteos y las extre- pacientes se recomienda la vía orogástrica.
midades inferiores. Debe determinarse el 4. Control de la volemia mediante la adminis-
tono rectal y revisar las heces en busca de tración de líquidos endovenosos y monito-
sangrado interno. ría horaria de la eliminación urinaria.

1421
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

5. Succión de secreciones de acuerdo con las ma difieren entre los grupos de edad: los
necesidades del paciente. pacientes más jóvenes a menudo se ven
6. Administración de analgésicos para manejo envueltos en accidentes de tránsito o en
del dolor y evaluación de la efectividad del acciones violentos, mientras la causa prin-
mismo. cipal de lesiones en los ancianos son las
7. Administración de antibióticos según la in- caídas y en los niños los traumatismos ce-
dicación médica, para disminuir el riesgo rrados constituyen cerca de 80% de los
de infección. casos de trauma.
8. Administración de toxoide antitetánico. • Enfermedades preexistentes: ciertas enfer-
9. Valoración constante de la integridad de la medades pueden predisponer a lesiones o
piel y cambios de posición. aumentar y agravar las complicaciones del
10.Curación de heridas; mantenerlas secas y trauma. Son de especial consideración los
determinar constantemente el sangrado. pacientes con diabetes mellitus, enferme-
11.Reposo y soporte de articulaciones con dad cardiovascular, enfermedad vascular
lesiones agudas. periférica.
12.Instrucción al paciente sobre el manejo y • Medicamentos: ciertos medicamentos pre-
cuidado de inmovilizaciones. disponen a lesiones: agentes antidiabéti-
13.Ayuda al paciente durante la movilización. cos, antihipertensivos, antiarrítmicos, anti-
14.Traslado del paciente, después de su es- histamínicos, antineoplásicos, barbitúricos,
tabilización y con monitoría permanente, benzodiazepinas, diuréticos, narcóticos,
para estudios diagnósticos, a salas de ci- etc.
rugía o a la unidad de cuidado intensivo.
15.Informar los cambios al médico tratante.
16.Disminuir la ansiedad del paciente con ex- EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
presiones de apoyo, amabilidad e informa-
ción sobre su estado actual y los procedi- Al terminar la revisión secundaria, se deben
mientos que se han de realizar. realizar exámenes complementarios que per-
17.Información a la familia sobre la situación mitan determinar o descartar lesiones ocasio-
del paciente (actividad conjunta entre médi- nadas por el trauma.
co y enfermera) y permitir el acompaña-
miento del paciente cuando sea pertinente. Radiografías: de columna cervical, tórax,
La presencia de los padres en el paciente pelvis y columna toracolumbar (si hay dolor
pediátrico es esencial para ayudar al niño en la espalda o déficit neurológico).
a afrontar el estrés de la lesión traumática.
Tomografía axial computadorizada (TAC):
En la evaluación secundaria existen otros as- si se relata pérdida del conocimiento o si el
pectos que se deben analizar, los cuales pue- paciente llega agitado o con cambios de com-
den incidir en el tratamiento y posterior ma- portamiento, se debe realizar una TAC de
nejo del paciente con trauma múltiple: cráneo.

• Edad: el traumatismo es la principal causa Ecografía abdominal: es de gran utilidad en


de muerte durante las primeras cuatro dé- la exploración del abdomen doloroso.
cadas de la vida. Los mecanismos de trau-

1422
CAPÍTULO IX: MANEJO INICIAL DE ENFERMERÍA DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

CONSIDERACIONES GENERALES miocárdica, neumotórax, ruptura de la aor-


ta por desaceleración, ruptura de hígado o
PACIENTES PEDIÁTRICOS bazo, fractura de pelvis o del acetábulo.
• El sistema esquelético es inmaduro y flexi- • Colisión con impacto posterior: lesión de
ble; en consecuencia, puede haber una le- columna cervical.
sión subyacente grave en ausencia de frac-
turas.
• Los niños, en especial los más pequeños, RECOMENDACIONES GENERALES
tienen una termorregulación inmadura o
inadecuada, por lo cual es fundamental Comprende las actividades de enfermería en
mantener el calor corporal. la preparación y organización de los recursos
• Los niños compensan bien la hipovolemia, humanos y físicos para la atención del pacien-
y por ello los signos clínicos de shock (en te politraumatizado. Además, las normas y
especial la hipotensión) pueden estar en- procedimientos básicos orientadas a prevenir
mascarados por un periodo prolongado de lesiones iatrogénicas en el paciente y acciden-
tiempo. tes laborales en el equipo de salud.

PACIENTES ANCIANOS 1. Técnica aséptica en todos los procedimien-


• Hay disminución de la capacidad para com- tos.
pensar. 2. Uso de los elementos de protección perso-
• La mortalidad aumenta con la edad. nal (gafas, guantes, delantal impermeable,
• La respuesta a los medicamentos puede gorro, tapabocas) y normas de bioseguri-
alterarse con la edad. dad, según las recomendaciones de los
• La respuesta inmune está disminuida. Centers for Disease Control and Prevention
• La termorregulación está disminuida. (CDC).
3. Registro detallado y preciso de los cam-
Mecanismos de lesión que aumentan la bios en el estado del paciente.
mortalidad en personas politraumatizadas: 4. Mantener la sala de trauma equipada con
• Salida del vehículo: expone al paciente a los elementos necesarios para el manejo
sufrir todo tipo de mecanismos traumáticos. del paciente politraumatizado en urgencias:
• Muerte de otros pasajeros. • Instrumental quirúrgico: cricotiroidoto-
• Extricación de más de 20 minutos. mía, toracotomía, tubo de tórax, equipo
• Caída mayor de seis metros. de pericardiocentesis, lavado peritoneal,
• Volcamiento del vehículo. venodisección, taponamiento nasal y
• Atropellamiento con despido: trauma crá- sutura.
neoencefálico, lesiones torácicas y abdomi- • Equipos:
nales, fracturas de extremidades inferiores. - Monitor no invasivo de presión arterial,
• Choque de automóviles a más de 60 km/ electrocardiografía, oximetría de pulso,
hora. frecuencia respiratoria y temperatura.
• Choque de motocicleta a más de 30 km/ - Calentador de líquidos (horno micro-
hora. ondas).
• Impacto frontal: con deformación del volan- - Bombas de infusión.
te, estallido radiado del parabrisas. El tipo • Suministros: equipo de aspiración de se-
de lesiones que se deben sospechar son: creciones, ambú y equipo de intubación
fractura de columna cervical, contusión endotraqueal, catéteres endovenosos

1423
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

de todos los calibres, equipos de infu- el auxiliar de enfermería en el manejo inicial


sión y transfusión, sondas vesicales de del paciente politraumatizado.
varios calibres, sondas nasogástricas de
varios calibres, catéteres centrales, tu- Enfermera 1: (enfermera líder)
bos de tórax de diferentes calibres, ele- 1. Evaluación inicial del paciente.
mentos de curación, férulas y tablas de 2. Evaluación y manejo de la vía aérea y la
inmovilización, collar cervical de varios ventilación.
tamaños, equipo de oxigenoterapia. Es- 3. Evaluación del estado de conciencia.
tos elementos deben mantener instala- 4. Informar y tranquilizar el paciente sobre los
das las conexiones de oxígeno y suc- diferentes procedimientos que se realicen
ción y estar preparados en bandejas que y sobre su estado actual.
faciliten su uso. 5. Planeación de las actividades durante el
• Soluciones cristaloides: lactato de Rin- manejo inicial.
ger y solución salina normal. 6. Traslado del paciente.
• Medicamentos: sedantes, relajantes 7. Revisión secundaria y procedimientos com-
musculares, electrolitos, anticonvulsi- plementarios.
vantes, antiarrítmicos y analgésicos. 8. Registros de la historia clínica.

Se recomienda revisar el inventario de estos Enfermera 2:


elementos en forma permanente al comienzo 1. Evaluación y manejo del patrón circulatorio.
de cada turno y hacer la reposición inmedia- 2. Administración de medicamentos.
tamente después de la atención de un
paciente. Auxiliar 1:
1. Exposición del paciente.
2. Iniciar la monitorización: tensión arterial,
ESQUEMA DE ACTUACIÓN frecuencia cardiaca, frecuencia respirato-
DE ENFERMERÍA ria, pulsoximetría y temperatura.
3. Actividades relacionadas con la prevención
La eficacia y eficiencia de la intervención de de la hipotermia.
enfermería en el manejo del paciente politrau- 4. Recolección de muestras de laboratorio.
matizado se logra con un equipo en el cual 5. Circular los procedimientos que se le reali-
cada miembro tiene funciones definidas, con zan al paciente.
el propósito de evitar la duplicación de activi-
dades o la subutilización de los recursos. Las Además del cirujano (idealmente experto en
funciones de Enfermería en el manejo del trau- la atención de trauma), quien debe ser el lí-
ma deben ser enseñadas en el programa de der en el manejo del paciente con trauma múl-
inducción en el momento del ingreso al servi- tiple, se debe contar con el apoyo de otras
cio de urgencias y deben ser fijadas en un lu- especialidades (ortopedia, urología, neurociru-
gar visible en la sala. Asimismo, las enferme- gía, etc.). El manejo complementario requie-
ras y auxiliares de enfermería deben recibir re la intervención de terapistas respiratorias,
capacitación en el manejo del paciente poli- técnicos de radiología, camilleros (traslado de
traumatizado. muestras de laboratorio, unidades de sangre,
traslado del paciente) y del servicio de aseo.
Se propone el siguiente esquema de actua-
ción, para el profesional de enfermería y para

1424
CAPÍTULO IX: MANEJO INICIAL DE ENFERMERÍA DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO

LECTURAS RECOMENDADAS

1. Centro de Referencia Nacional sobre Violencia. científica: politraumatizados. Primera edición. Ins-
Lesiones de causa externa. Subdirección de Ser- tituto de Seguros Sociales (ISS) y Asociación Co-
vicios Forenses. Bogotá, Colombia, 1998. lombiana de Facultades de Enfermería
2. American College of Surgeons. ATLS, Programa (ACOFAEN). Bogotá, 1998.
Avanzado de Apoyo Vital en Trauma para Médi- 6. Petersen C. Prevención de traumatismos y lesio-
cos. Sexta edición. Comité de Trauma del Cole- nes multisistémicas. En: Enfermería de Urgencias.
gio Americano de Cirujanos, Chicago, 1997. Editado por Emergency Nurses Association.
3. Cordero A. Manejo inicial del trauma. Actual McGraw-Hill Interamericana. Madrid, 2001.
Enferm 2002; 5:21-25. 7. Strange L. Shock trauma care plans. Springhouse
4. Emergency Nurses Association (ENA). Trauma Corporation. Springhouse, 1987.
nursing care. Third edition. Award Printing Corp. 8. Swartz C, Torbert S. Traumatismos. En: Urgen-
Chicago, 1995. cias en Enfermería. Editado por P Stinton, P Sturt.
5. González L, Jiménez M, Herrera A, et al. Guía de Segunda edición. Editorial Océano. Barcelona,
intervención en enfermería basada en evidencia 2000.

1425
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

CAPÍTULO X

Técnicas para el aislamiento hospitalario

María del Pilar Cuervo Polanco, Enf


Coordinadora de Enfermería
Fundación Santa Fe de Bogotá

E l manejo de pacientes con infecciones gra-


ves en un servicio de urgencias es un pro-
blema que se presenta con relativa frecuen-
• Categoría B. Evidencia moderada que sus-
tenta las recomendaciones para su uso.
• Categoría C. Evidencia insuficiente para
cia. Las normas universales de aislamiento de- recomendar o no su uso.
ben ser aplicadas desde el momento en que • Categoría D. Evidencia moderada que sus-
se identifique o se sospeche una enfermedad tenta excluir su uso.
infecciosa que ponga en peligro de contami- • Categoría E. Evidencia satisfactoria que
nación al personal y al medio hospitalario. sustenta excluir su uso.

Esta guía se fundamenta en recomendacio- De acuerdo con la calidad de evidencia en:


nes de los Centers for Disease Control and
Prevention (CDC, Atlanta), el Hospital Infection Categoría I: Evidencia emanada de por lo
Control Practice Advisory Committee menos un experimento clínico controlado y
(HICPAC) y la Guía de Intervención de Enfer- adecuadamente aleatorizado o de un meta-
mería de Infecciones Intrahospitalarias reali- análisis de alta calidad.
zada por el convenio entre el Instituto del Se-
guro Social y la Asociación Colombiana de Categoría II: Evidencia obtenida de por lo
Facultades de Enfermería (ACOFAEN) con el menos un experimento clínico bien diseñado
fin de prevenir la transmisión intrahospitalaria pero no randomizado, estudios analíticos ob-
de agentes infecciosos. servacionales y estudios de casos y contro-
les, preferiblemente realizados en más de un
Las recomendaciones se categorizan según centro o en múltiples series de tiempo o estu-
el nivel de evidencia (NE) existente, la raciona- dios con resultados negativos en experimen-
lización teórica, la aplicabilidad y el impacto tos no controlados.
económico, de manera que sea posible tener
un punto de comparación con un organismo Categoría III: Opiniones de autoridades res-
líder en el estudio de la infección intrahospita- petadas basadas en la experiencia clínica,
laria y de reconocimiento mundial. estudios descriptivos o reportes de comités
de expertos.
Las recomendaciones se categorizan de
acuerdo con la fuerza de la evidencia en: Las recomendaciones se limitan a las precau-
ciones de aislamiento; por lo tanto, tienen que
• Categoría A. Evidencia satisfactoria que estar apoyadas por políticas y procedimien-
sustenta las recomendaciones para su uso. tos institucionales.

1426
CAPÍTULO X: TÉCNICAS PARA EL AISLAMIENTO HOSPITALARIO

La transmisión de la infección dentro de un • La transmisión por gotas: ocurre cuando


hospital requiere cuatro elementos básicos: las gotas infectadas son lanzadas a corta
distancia y no permanecen suspendidas en
• Una fuente de infección. el aire.
• Un microorganismo infectante. • La transmisión por aerosol: ocurre por di-
• Una vía de transmisión efectiva. seminación de partículas menores de cin-
• Un huésped susceptible. co micras, que pueden suspenderse en el
aire y transportarse a mayores distancias.
La fuente de infección puede ser: • La transmisión por medio de un vehículo:
cuando el microorganismo se transmite a
• Endógena: cuando el microorganismo través del agua, aire, los alimentos o me-
infectante proviene de la flora propia del dicamentos.
paciente, el personal de salud y/o los visi- • La transmisión por medio de un vector:
tantes (enfermos o portadores). cuando la transmisión es ocasionada por
• Exógena: cuando el germen infectante se insectos o roedores, como por ejemplo la
encuentra en materiales y equipos, en otras malaria, el dengue y la rabia.
personas colonizadas o infectadas, o en el
medio ambiente. Huésped susceptible: la resistencia del hués-
ped varía según las condiciones inmunológi-
El microorganismo infectante es cualquier ger- cas, nutricionales, sociales, edad, violación
men capaz de producir en el húesped infec- mecánica de las barreras del huésped (ciru-
ción o enfermedad. Tal capacidad es dada por gía, anestesia, inserción de catéteres, puncio-
la concentración microbiana, la resistencia mi- nes), tratamientos inmunosupresores (irradia-
crobiana, el tamaño del inóculo y el ciclo en ción, corticoesteroides), entre otros.
que se encuentre.
Para que el proceso infeccioso se desarrolle
La vía de transmisión es el mecanismo median- deben ocurrir los siguientes eventos:
te el cual el germen ingresa al húesped sus-
ceptible (aquel que no ha desarrollado inmuni- • Encuentro del agente-fuente con el huésped.
dad activa o pasiva frente al germen infectante). • Entrada del agente.
Ésta puede ser por contacto, gotas, aerosoles, • Diseminación del microorganismo.
por un vehículo común o por vectores. • Multiplicación celular.
• Daño celular.
• La transmisión por contacto es la más fre- • Enfermedad propiamente dicha con sus
cuente y puede ocurrir por: signos y síntomas.
- Contacto directo: cuando entran en con- • Eliminación del germen.
tacto dos superficies corporales y exis-
te transferencia de microorganismos en- El aislamiento hospitalario se utiliza para evi-
tre un húesped susceptible y otro colo- tar la transmisión de enfermedades infeccio-
nizado o infectado a través de las ma- sas y pretende interrumpir la cadena de trans-
nos, u otros contactos. misión, disminuir la incidencia de infección
- Contacto indirecto: cuando la transferen- nosocomial, prevenir y controlar brotes, racio-
cia ocurre por medio de objetos inanima- nalizar el uso de recursos y mantener una alta
dos como agujas, instrumental, u otros calidad de atención.
elementos.

1427
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

El aislamiento hospitalario tiene las siguien- inicio del turno, antes y después de todo
tes características: es electivo, no es invasor, procedimiento, al estar en contacto directo
es insustituible, no requiere orden médica, en con la piel del paciente, con sangre, secre-
él interviene todo el equipo de salud y puede ciones o líquidos corporales o con elemen-
ser realizado dentro del hospital y fuera de tos contaminados y después de quitarse
éste. los guantes. NE Categoría AI.
• Guantes: deben usarse como barrera pro-
A partir de 1994 los CDC definieron las cate- tectora de la piel ante el contacto con sangre
gorías de aislamiento en cinco grupos según o líquidos corporales (el sudor se excluye
la vía de transmisión, así: como fluido corporal de riesgo biológico), pa-
ra reducir el riesgo de contaminación del per-
1. Precauciones generales. sonal a los pacientes al realizar procedimien-
2. Precauciones estándar. tos invasores y para evitar la contaminación
3. Precauciones por gotas. de las manos en el manejo de materiales
4. Precauciones por aerosol. contaminados. Éstos se deben cambiar en-
5. Precauciones por contacto. tre procedimientos y después del contacto
con el material que tenga alta concentración
Esta clasificación pretende simplificar, facili- de microorganismos. Los guantes no reem-
tar y hacer más económico el aislamiento por plazan el lavado de las manos porque pue-
categorías, en tal forma que se controle el ries- den existir en ellos pequeñas perforaciones.
go a través de la interrupción de la cadena de • Mascarillas y gafas: deben ser utilizados
transmisión del germen. La norma debe ser en la realización de procedimientos que ge-
cumplida por todo el equipo de salud y por la neran salpicadura o aerosoles de líquidos
familia del paciente hasta obtener reportes de o secreciones corporales en ojos, piel y/o
cultivos negativos. mucosas. Éstos deben cubrir nariz y boca.
• Ropa contaminada del paciente: debe ma-
nipularse con guantes, depositarse en la
PRECAUCIONES GENERALES bolsa destinada para tal fin y enviarse a la
lavandería especificando su contenido.
Se deben aplicar a todos los pacientes. Las • Batas y delantales: son usados durante el
siguientes precauciones tienen NE Categoría contacto directo con pacientes que tengan
AIII. microorganismos epidemiológicamente
infectantes; preferiblemente deben ser im-
• Habitación o cubículo del paciente: debe permeables y deben desecharse o enviarse
ser individual e incluir lavamanos, toallas a esterilizar.
de papel, sanitario y sitio para guardar la • Desinfección de la habitación y equipos:
ropa. Cuando sea necesario utilizar habi- debe hacerse de acuerdo con las recomen-
taciones múltiples, éstas se deben compar- daciones de la guía de técnica aséptica.
tir con pacientes infectados por el mismo • Manejo de desechos hospitalarios: de
germen y/o ubicarlos a una distancia no acuerdo con el protocolo institucional.
menor de un metro. Siempre mantener ce- • Objetos inanimados como libros, revistas
rrada la puerta de la habitación. y juguetes: deben desinfectarse o destruir-
• Lavado de manos: es considerado el pro- se en caso de contaminación. Evitar que
cedimiento más importante para reducir la las historias clínicas y radiografías estén
infección hospitalaria. Debe realizarse al en contacto con secreciones del paciente.

1428
CAPÍTULO X: TÉCNICAS PARA EL AISLAMIENTO HOSPITALARIO

• Traslado de pacientes: es importante limi- • Guantes y bata: se usan solamente si hay


tar el traslado y transporte del paciente in- riesgo de salpicadura.
fectado para reducir la transmisión de mi- • Limpieza y desinfección de la habitación y
croorganismos en el hospital; cuando sea equipos utilizados según la guía de técni-
necesario trasladarlo, se deben informar las ca aséptica.
medidas de manejo y colocar las barreras
de protección al personal y/o al paciente
según el tipo de aislamiento que requiera PRECAUCIONES POR AEROSOL
(mascarilla y guantes, entre otros). (micropartículas aéreas)
• Ventilación mecánica: nunca boca a boca
o boca a tubo. Agrupa el aislamiento estricto y el ácido alco-
• Cumplimiento de las normas internas del hol resistente de la clasificación antigua. Se
sitio de trabajo: no comer en el sitio de tra- debe usar cuando la diseminación de micro-
bajo, no fumar, no usar anillos, pulseras y/ organismos se hace en partículas menores de
o cadenas durante los procedimientos; cinco micras que permanecen suspendidas en
mantener el cabello recogido; evitar el uso el aire por largos períodos de tiempo, que se
de esmalte en las uñas de las manos. dispersan y son inhaladas por huéspedes sus-
• Información al paciente y a la familia: una ceptibles (Tabla 2).
vez se decida instaurar el aislamiento, se
debe asegurar que el paciente y/o su fami- ESPECIFICACIONES (NE CATEGORÍA AIII)
lia lo entiendan, lo respalden y lo obedecen.
• Precauciones estándar: seguir las indica-
ciones de este tipo de aislamiento.
PRECAUCIONES POR GOTAS • Habitación individual: con presión negati-
va de aire; si no se cuenta con este tipo de
Se utilizan cuando la transmisión del microor- presión se debe mantener la puerta cerra-
ganismo infectante ocurre en partículas mayo- da y las ventanas abiertas. Las ventanas
res a cinco micras que son generadas al hablar, deben estar ubicadas en zonas de poco
toser y/o estornudar, hasta un metro de distan- tráfico y preferiblemente con zonas verdes.
cia, quedando suspendidas en el aire (Tabla 1). • Uso de mascarilla de alta eficiencia al entrar
Las especificaciones son NE Categoría AIII. a la habitación: son mascarillas categoría N
con 95% de eficiencia en la filtración, reco-
• Precauciones estándar: seguir las indi- mendadas por los CDC y el Instituto Nacio-
caciones de este tipo de aislamiento. nal de Salud y Seguridad Ocupacional
• Habitación individual: pacientes con un (NIOSH) de los Estados Unidos de América.
mismo tipo de germen pueden compartir • Transporte limitado del paciente: en caso
la misma habitación y /o ser ubicados a una necesario, colocarle mascarilla de alta efi-
distancia no menor de un metro. ciencia al paciente.
• Uso de mascarilla corriente: para contacto • Lavado de manos estricto: al estar en con-
directo con el paciente (a menos de un me- tacto directo con el paciente o sus fluidos.
tro de distancia) o para realizar cualquier • Guantes y bata: se usan solamente si hay
procedimiento. riesgo de salpicadura.
• Transporte limitado del paciente: si es ne- • Limpieza y desinfección de la habitación y
cesario, se debe colocar la mascarilla co- los equipos utilizados según la guía de
rriente al paciente. técnca aséptica.

1429
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

TABLA 1. INDICACIONES, MATERIAL INFECTANTE Y TIEMPO DE AISLAMIENTO DE PRECAUCIONES POR GOTAS


Patología Material Infectante Tiempo de Aislamiento
Enfermedades por Haemophilus Secreciones nasales y faríngeas. Hasta 24 horas después de iniciada la
influenzae tipo B (sepsis, antibioticoterapia.
meningitis, neumonía, epiglotitis).
Enfermedades por Neisseria menin- Secreciones nasales y faríngeas. Hasta 24 horas después de iniciada la
gitidis (meningitis, neumonía, sepsis) antibioticoterapia.
Difteria faríngea activa. Secreciones faríngeas. Hasta terminar la antibioticoterapia y tener
dos hemocultivos negativos.
Neumonía por Mycoplasma. Secreciones nasales y faríngeas. Hasta 10 días después de iniciado el
tratamiento.
Bacteremia, neumonía y/o Secreciones nasales y faríngeas. Hasta 24 horas después de iniciado el trata-
meningitis por meningococo. miento.
Tosferina Secreciones nasales y faríngeas. Hasta siete días después de iniciado el
tratamiento.
Faringitis por Estreptococo B Secreciones nasales, faríngeas y Hasta terminar la antibioticoterapia y tener
hemolítico del grupo A. sanguíneas. dos hemocultivos negativos.
Fiebre escarlatina Secreciones nasales y faríngeas Hasta dos días después de iniciado el
tratamiento
Parvovirus B 19 Secreciones nasales y faríngeas. Durante toda la hospitalización.
Infecciones virales como influenza. Secreciones nasales y faríngeas. Hasta cuatro días después de la iniciación
de signos y síntomas.
Adenovirus Secreciones nasales y faríngeas, heces. Durante la hospitalización.
Rubeola Secreciones nasales y faríngeas, orina, Hasta cuatro días después de iniciado el
sangre y heces. exantema.
Rubeola congénita Secreciones nasales y faríngeas, orina, Durante cualquier hospitalización hasta
sangre y heces. cumplir un año de edad.
Parotiditis Secreciones salivares. Hasta nueve días después de iniciado el
edema glandular.

TABLA 2. INDICACIONES, MATERIAL INFECTANTE Y TIEMPO DE AISLAMIENTO DE PRECAUCIONES POR AEROSOL


Patología Material Infectante Tiempo de Aislamiento
Cuadro clínico de brotes vesículo/máculopapular con coriza y fiebre
Sarampión Secreción nasofaríngea Hasta seis días después de iniciado el
tratamiento y aparecido el brote cutáneo
Varicela Secreción respiratoria y lesiones Hasta cuando todas las lesiones tengan
dérmicas costra
Herpes Zóster Secreción salivar o vesiculopapular Hasta 24 horas después de terminada la
terapia medicamentosa y las lesiones
tengan costra
Tuberculosis pulmonar activa Secreción nasofaríngea Tres semanas después de haber iniciado el
y laríngea tratamiento antimicrobiano
Pacientes VIH positivos con cuadro Secreción nasofaríngea Hasta cuando se descarte tuberculosis
de fiebre e infiltrado pulmonar
Tos ferina Secreción nasofaríngea Secreción nasofaríngea cinco días después
de iniciada la antibioticoterapia

1430
CAPÍTULO X: TÉCNICAS PARA EL AISLAMIENTO HOSPITALARIO

- Los artículos contaminados deben des- PRECAUCIONES POR CONTACTO


infectarse antes de ser desechados.
- Airear la habitación. Sólo está indicado Se agrupan en este tipo de precauciones las
después del egreso de un paciente con entéricas, de piel y heridas y de gérmenes mul-
tuberculosis pulmonar. Se hace con tirresistentes. Se utiliza cuando se conoce o
puerta cerrada, ventanas abiertas y lue- sospecha la infección o colonización de pa-
go se procede a la desinfección termi- cientes con microorganismos que se transmi-
nal. El cuarto puede darse al servicio tan ten por contacto directo (manos, piel o con-
pronto finalice la desinfección terminal. tacto directo) (Tabla 3).

TABLA 3. INDICACIONES, MATERIAL INFECTANTE Y TIEMPO DE AISLAMIENTO DE PRECAUCIONES DE CONTACTO

Patología Material Infectante Tiempo de Aislamiento


Infecciones o colonizaciones por Secreciones Hasta terminar la antibioticoterapia y tener
gérmenes multiresistentes. dos hemocultivos negativos.
Infecciones gastrointestinales. Heces, secreciones. Hasta tener coprocultivos negativos.
Enfermedades entéricas causadas
por Clostridium difficile, E. coli,
Shigella sp.
Hepatitis A, E, Rotavirus Heces Una semana después de la ictericia.
Infecciones por virus respiratorio: Secreciones nasofaríngeas, heces. Hasta cuando termine la enfermedad.
sincitial, parainfluenza o enterovirus.
Infecciones de piel altamente contagiosas como:
Difteria cutánea Lesiones cutáneas. Hasta terminar la antibioticoterapia y tener
dos cultivos negativos.
Herpes simple neonatal Secreción respiratoria. Hasta 14 días y tener dos cultivos negativos
24 horas después de terminada la
antibioticoterapia
Impétigo Lesiones cutáneas Hasta 24 horas después de iniciada la
antibioticoterapia
Forunculosis por Estafilococo Secreción cutánea Hasta cuando termine la enfermedad.
Abscesos Secreciones Duración de la enfermedad.
Pediculosis Piojo vivo Hasta 24 horas después de iniciado el
tratamiento.
Escabiosis Ácaro Hasta 24 horas después de iniciado el
tratamiento.
Conjuntivitis viral o gonocóccica. Secreción ocular. Hasta cuando termine la enfermedad.
Fiebres hemorrágicas: Secreciones sanguíneas orofaríngeas, Hasta tener hemocultivos negativos.
ébola lassa, marburgo. semen.

1431
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

ESPECIFICACIONES (NE CATEGORÍA AIII) LECTURAS RECOMENDADAS

• Precauciones estándar: seguir las indica- 1. Arroyave ML, González G. Infección intrahospi-
ciones en este tipo de aislamiento. talaria: prevención y control. Tercera edición. Co-
mité de Control de Infecciones Hospital Universi-
• Habitación individual: pacientes con un mis-
tario San Vicente de Paul. Medellín, 1999.
mo tipo de germen pueden compartir la 2. Benenson AS, Organización Panamericana de la
misma habitación y /o ubicarlo a una distan- Salud. Manual par el control de las enfermedades
cia no menor de un metro. transmisibles en el hombre. OPS. 16ª edición.
• Uso de mascarilla corriente o de algodón: Washington, 1997.
para contacto directo con el paciente (a me- 3. Guideline for Isolation Precautions in Hospitals.
nos de un metro de distancia). Centers for Disease Control. Atlanta, 1995.
4. Guideline for prevention of surgical site infection.
• Transporte limitado del paciente: en caso
Centers for Diseases Control. Atlanta, 1999.
necesario, colocarle mascarilla corriente. 5. Laboratory Centers for Disease Control, Health
• Lavado de manos estricto: al estar en con- Canada. Infection control guidelines: hand was-
tacto con el paciente o sus fluidos. hing, cleaning, desinfection and sterilization in
• Guantes y bata: se usan solamente si hay health care. Supplement. 1998.
riesgo de salpicadura. 6. Navarro MC, De Pimiento S, Prada G, et al. Pro-
tocolo: técnicas de aislamiento. Fundación Santa
• Limpieza y desinfección de la habitación y
Fe de Bogotá. Bogotá, 1996.
equipos. Los elementos contaminados 7. Organización Panamericana de la Salud. Manual
deben desinfectarse antes de ser dese- de prevención y control de infecciones intrahospi-
chados. talarias. PALTEX. Washington, 1996.
8. Ponce de León S, Soto JL. Infecciones intrahospi-
talarias. Editorial McGraw-Hill Interamericana.
México DF, 1996.
PROCESO ADMINISTRATIVO 9. Ramírez MC, Díaz de Correa Y, Luna MA. Guía
de intervención en enfermería basada en la evi-
La implementación de las medidas de aisla- dencia: Infecciones Intrahospitalarias. Convenio
miento requiere seguir un proceso adminis- Instituto de Seguro Social y Asociación Colombia-
trativo que se desarrolla a partir del conoci- na de Facultades de Enfermería. Bogotá, 1998.
miento del reporte de laboratorio por parte del 10. Secretaría Distrital de Salud de Bogotá. Protoco-
médico tratante y de la enfermera jefe del ser- los de vigilancia en salud pública. Bogotá, 1998.
11. Subdirección de Prevención. Programa de pato-
vicio donde está el paciente, quienes de co-
logías infecciosas. Ministerio de Salud. Colombia,
mún acuerdo y con la asesoría del comité de 1998.
infecciones, eligen el tipo de aislamiento. Se 12. Vélez H, Borrero J, Restrepo J, et al. Fundamen-
procede a informar al paciente y familiares y tos de Medicina: Enfermedades infecciosas. Quin-
suministrar al personal de enfermería las ins- ta edición. Corporación para Investigaciones Bio-
trucciones pertinentes. lógicas. Medellín, 1998.

1432
CAPÍTULO XI: ATENCIÓN HUMANA DEL PACIENTE DE URGENCIAS

CAPÍTULO XI

Atención humana del paciente de urgencias

Clara Inés Durán Roja, Enf.


Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN HUMANIZACIÓN Y
DESHUMANIZACIÓN
E standarizar la humanización del cuidado
resulta un tema complejo de abordar, de-
bido a que el ser humano es un conjunto de
“El primer acto del tratamiento de la enferme-
dad, es dar la mano y una muestra de cariño
valores, reacciones y sentimientos, único e in- al paciente…” Von Leyden.
divisible, que vive y responde ante la enferme-
dad de diferentes maneras, de acuerdo con La salud y la enfermedad no son valores abso-
sus experiencias, sus conocimientos y su mo- lutos a conseguir o combatir en la vida, son
do de vida; por lo tanto, cada persona debe las formas a través de las cuales una persona
ser atendida de manera individual. Sin embar- da curso a su existencia. En el momento de
go, esta guía ofrece lineamientos generales vivenciar la enfermedad, es decir, en el de su-
de atención humanizada, puesto que, la cali- frir una alteración en su entorno interno (gené-
dad humana debe estar presente en la aten- tico, fisiológico, psicológico, etc.) y/o su entor-
ción del paciente quien se torna frágil y an- no externo (físico, social, económico, etc.) la
gustiado frente a la enfermedad. persona amerita especial atención.

El principal objetivo de este documento es Humanizar la relación entre las personas que
promover la reflexión en los profesionales de poseen los conocimientos técnico científicos
la salud, en particular en las enfermeras, acer- y el ser humano que se enfrenta al duro tran-
ca de su actuación en el momento de curar y ce de la enfermedad, implica, según Bayon,
cuidar las personas enfermas. Asimismo, re- el ejercicio de las siguientes actividades: la
conocer la importancia y el significado que tie- benevolencia, significa querer el bien del otro;
ne para la persona enferma, el hecho de reci- la beneficencia, obliga al profesional a poner
bir una atención humana y no solamente cien- el máximo empeño en atender el paciente en
tífica; de esto depende en muchas ocasiones todos sus aspectos y hacer cuanto pueda para
la adhesión a los tratamientos y cuidados. mejorar su salud de la forma que considere
más adecuada y la beneficencia, que indica
efusión hacia el paciente para compartir con‘él
algo que le pertenece íntimamente y que se
convierte en confidencia para establecer tra-
tamientos y cuidados, entre las dos partes, que
beneficien al paciente. Esto significa que

1433
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

humanizar el cuidado requiere de la interac- Estrés: condición que surge cuando se perci-
ción entre los conocimientos de la ciencia y be una situación que resulta amenazante y
los valores del ser humano para poder esta- para la cual se cree que no se tienen los re-
blecer una asistencia con calidad. cursos suficientes para la adecuada supera-
ción. Es producto de la relación con el medio
Se entiende por deshumanización la pérdida físico y social que rodea al individuo.
de los atributos y de la dignidad humana en el
contexto de la relación del profesional de la Desesperanza: mezcla de sentimientos, emo-
salud con el paciente. ciones y pensamientos, que se centra en la
creencia fundamental de que no hay solución
a las necesidades y problemas de importancia.
RESPUESTAS DEL PACIENTE ANTE
LA ENFERMEDAD Irritación o agresividad: producida por la
frustración de no poder hacer nada por sí
Son sentimientos o manifestaciones expresa- mismo, la pérdida de control de la situación y
dos por los pacientes ante la enfermedad y los conflictos internos que se generan por la
con los que, con mayor frecuencia, se lidia en enfermedad; es la forma de enfrentar la an-
los servicios de urgencias. Es importante que siedad.
el médico y la enfermera estén atentos a es-
tas señales para tranquilizar, ofrecer seguri-
dad y confianza y aliviar la sensación o pro- CARACTERÍSTICAS ESENCIALES
porcionar comodidad al paciente. DEL ACTO DE CURAR Y CUIDAR
Dolor: según Albrecht, es todo aquello que la Se define curar como intervenir sobre la en-
persona que lo experimenta y describe como fermedad y cuidar como las actividades que
tal y existe cuando lo expresa de manera ver- permiten alcanzar un mayor grado de bienes-
bal o no verbal. Es una experiencia humana tar. Para Hipócrates, el arte de curar se codi-
que incapacita, aflige, descompensa y que en fica en cuatro características importantes: ante
muchas veces no se tolera. todo jamás hacer daño; siempre que sea po-
sible suavizar; a veces curar; pero siempre
Sufrimiento: se origina ante una sensación tranquilizar. Cuidar exige a los profesionales
de amenaza, es decir, cuando el origen de la de salud utilizar dos de sus cualidades huma-
enfermedad es desconocido, cuando se cree nas: la capacidad de razonar y la capacidad
que no puede ser aliviado o cuando su signifi- de sentir y demostrar empatía hacia el pacien-
cado es funesto. te. Esto refuerza una vez más la idea de que
la humanización del cuidado es una respon-
Ansiedad: reacción normal al estrés y a las sabilidad profesional ineludible, implícita en el
amenazas percibidas inespecíficamente. Es quehacer asistencial y, desde siempre, ha sido
una emoción que surge ante la percepción de un reto para la ética profesional.
peligros reales o imaginarios que se experi-
mentan de manera física, psicológica o emo- El interés científico y el uso de la tecnología
cional. por parte de los profesionales de la salud tien-
den a desplazar el componente humano en la
Miedo: respuesta ante una amenaza especí- relación médico, enfermera y paciente. Pare-
fica. ciera que la tecnología redujera las múltiples

1434
CAPÍTULO XI: ATENCIÓN HUMANA DEL PACIENTE DE URGENCIAS

facetas del sentido del hombre enfermo (físi- consideración las necesidades del paciente
co, psíquico, social, emocional, espiritual y quien, finalmente, es el árbitro de su propio
cultural) a un simple problema biológico, toda cuerpo. Esto no significa que se deban aban-
vez que facilita la monitoría de los signos vi- donar la técnica, las habilidades y las destre-
tales, los procedimientos invasores y el con- zas necesarias para el cuidado del ser huma-
trol de las alteraciones fisiológicas para lograr no; el conocimiento y el dominio de los mismos
la supervivencia. Sin embargo, el proceso de son de extrema importancia, pues la asisten-
cuidar se desarrolla a partir de las interaccio- cia debe integrar la dimensión de la relación
nes que se establecen con la utilización de humana y la dimensión de la técnica para po-
los conocimientos científicos, los procedimien- sibilitar el verdadero cuidado de los profesio-
tos técnicos para el cuidado físico, biológico y nales de salud.
la relación humana médico-enfermera-pacien-
te para comprender su historia de vida, su Sin duda alguna, es la enfermera quien habi-
manera de actuar y de responder frente a la tualmente está en contacto directo y perma-
enfermedad. nente con el paciente; por ello constituye un
punto de referencia adecuado para humani-
Se entiende el cuidado como la capacidad de zar la atención y el cuidado. Ser enfermera,
asistir, guardar, conservar, recelar o preocu- consiste fundamentalmente en atender al pa-
parse por algo o alguien. Para Márques, el ciente en aquellas actividades que contribu-
cuidado incluye: yen al restablecimiento de la salud. Por esto
la enfermera siempre debe mantener una ac-
1. La acción encaminada a hacer algo por titud de tolerancia, sensibilidad, respeto y amor
alguien que no puede desempeñar por sí hacia el paciente y ser puente de comunica-
mismo sus necesidades básicas, tales co- ción entre los miembros del equipo de salud.
mo alimentación, higiene personal, elimina-
ción, termorregulación, sueño, descanso, Furegato refiere que para los pacientes las
comodidad, actividad y movilidad; es de- enfermeras son personas competentes, bon-
cir, sustituir a la persona cuando ella no dadosas, entregadas y cariñosas, que luchan
puede autocuidarse. en cada instante por el bienestar de quien
2. Dar explicaciones para enseñar algo des- cuidan; además, están constantemente próxi-
conocido relacionado con la mejora de la mas para aliviar el dolor, el sufrimiento y pro-
salud o la adaptación a su enfermedad. piciar alternativas de mejoría y distracción ante
Educar para disminuir miedos irracionales, la situación actual. Por encima de las interven-
enseñar la mejor forma de seguir el trata- ciones técnicas, indispensables para mejorar
miento y fomentar el autocuidado. su estado de salud, las enfermeras están
3. La posibilidad de expresión emocional, con siempre ahí presentes para atender su llama-
palabras, gestos o silencios. do, escuchar su angustia y esto es justamen-
4. La intención de mejorar la calidad de vida te lo que hace la diferencia en el cuidado.
del enfermo y de su familia ante la nueva
experiencia que debe afrontar. Esto impli- Asimismo, Da Silva identificó que para los
ca fomentar la independencia y la autono- pacientes el cuidado de enfermería se confi-
mía. gura en la aplicación de los conocimientos
científicos y la manifestación de actitudes de
El cuidado no tiene sentido si sólo se consti- cariño, preocupación y paciencia propias de
tuye de conocimientos técnicos sin tener en la afectividad humana y que deben ocurrir

1435
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

cuando las personas pasan a vivir el ambien- Debido a que la atención de urgencia amerita
te hospitalario. una intervención rápida, oportuna y eficaz para
aliviar el dolor, el sufrimiento y evitar complica-
En este sentido, las enfermeras deben pre- ciones severas, se dejan de percibir otras ne-
ocuparse cada vez más por aprender y desa- cesidades que experimenta el paciente, como,
rrollar habilidades y estrategias para ofrecer la incertidumbre, el miedo, la ansiedad y la
un cuidado humanizado, en la misma forma incomodidad. Igualmente, no se toma concien-
como el desarrollo científico y tecnológico lo cia de que el paciente pasa a vivenciar el en-
exige para intervenir en la enfermedad. torno hospitalario, en muchas ocasiones des-
conocido para él, un ambiente pleno de ruti-
nas, de realización de exámenes diagnósticos
CARACTERÍSTICAS DE LA ATENCIÓN y terapéuticos, casi siempre impuestos pero
EN EL SERVICIO DE URGENCIAS necesarios, y se ve obligado a depositar su
confianza en los profesionales de salud.
El servicio de urgencias merece especial con-
sideración; la persona acude para ser atendi- Sadala resalta que las dificultades vividas por
da por una enfermedad de aparición súbita, los pacientes están relacionados con los sen-
que le causa desequilibro biológico, psicoló- timientos de inseguridad que experimenta en
gico y social. Presenta signos y síntomas que el hospital, en el cual, la prioridad de los pro-
le generan incomodidad, angustia e interrup- fesionales se centra en los aspectos biológicos
ción abrupta de su ritmo de vida. La atención y técnicos para la conservación de la vida y la
de enfermería debe caracterizarse por un alto manipulación de aparatos utilizados para tal
componente de calor humano y apoyo al pa- fin.
ciente para asimilar el problema y asumir el
tratamiento. No obstante, éste es uno de los
servicios donde con mayor frecuencia se ob- INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA
serva una tendencia a la deshumanización y
a centrar la atención en el aspecto meramente Se propone visualizar el proceso de atención
físico. de urgencias para identificar los factores que
tienden a la deshumanización del cuidado y,
La atención del paciente en el servicio de ur- al mismo tiempo, una vez reconocidos, for-
gencias, independientemente del nivel de mular estrategias para neutralizarlos.
complejidad y del motivo de consulta, involucra
tres elementos que intervienen desde el prin- El proceso de atención consta de los siguien-
cipio hasta el final del proceso: el paciente, tes pasos (Figura 1).
quien es el actor principal; el acompañante,
generalmente un familiar o un amigo, y el pro-
• INGRESO (TRIAGE,
fesional de salud que lo atiende. Para lograr ADMISIÓN
ADMINISTRATIVA)
una atención integral con calidad debe ocurrir • EXAMEN
una interacción continua entre los tres, en tal • TRATAMIENTO
• AYUDAS
forma que el profesional proporcione sus co- DIAGNÓSTICAS
• OBSERVACIÓN
nocimientos y habilidades humanas, el pacien-
te exprese sus sentimientos y valores y la fa- Paciente Atención de urgencias Resultado
milia se haga partícipe del proceso para ayu-
dar a la recuperación del paciente. Figura 1. Proceso de atención en urgencias.

1436
CAPÍTULO XI: ATENCIÓN HUMANA DEL PACIENTE DE URGENCIAS

Triage: cuando el paciente ingresa al servicio cia; en este aspecto la enfermera del triage
de urgencias, su primer contacto es con la en- debe velar porque el paciente reciba la aten-
fermera del triage, quien realiza una valora- ción médica adecuada y oportuna, más allá
ción rápida para determinar la prioridad y el de las limitaciones administrativas.
tipo de atención que debe recibir.
Área de examen y tratamiento: en este lugar
• El triage es el lugar de recepción y acogida se realiza la valoración médica y se inician
del paciente; son los primeros minutos de algunos procedimientos diagnósticos y tera-
la vivencia hospitalaria del paciente. La en- péuticos por parte del personal de enfermería
fermera, en un periodo breve, debe iniciar y otros profesionales.
una interacción adecuada con el paciente,
para disminuir el miedo, la ansiedad, la an- En la práctica cotidiana se observa que, tanto
gustia y la irritabilidad propias de la enfer- médicos como enfermeras, caen en la rutina
medad y agravada por la larga espera que, del trabajo con las siguientes consecuencias:
en la mayoría de los casos, se presenta en
los servicios de urgencias. Se logra al sa- • Se realiza una valoración fragmentada e
ludar con amabilidad, establecer contacto indiferenciada del ser humano y se inter-
visual, preguntarle el nombre, escuchar con vienen los aspectos biológicos para mejo-
atención el motivo de consulta, demostrar rar o restablecer el patrón disfuncional; sin
interés por ayudarlo, explicarle el procedi- embargo, no se contemplan los aspectos
miento a seguir y el tiempo probable de es- psicológicos y sociales que hacen parte de
pera para la atención médica. Si, por el con- la vida de esta persona.
trario, la atención es indiferente, limitada y • Existe una gran familiaridad con el trabajo,
cortante, se genera mayor tensión, resis- a tal punto, que para cada procedimiento
tencia y predisposición para recibir el trata- hay una rutina y muchas veces el profesio-
miento y los cuidados a pesar de la nece- nal realiza las actividades sin explicarlas
sidad. al paciente y sin considerar el significado
• La enfermera debe hacer el seguimiento que tienen para éste. Por ejemplo, la veno-
periódico de los pacientes que se encuen- punción es un procedimiento común y pa-
tran pendiente en la sala de espera. En ca- rece sencillo para la enfermera, pero para
so de congestión del servicio de urgencias el paciente puede ser su primera experien-
debe realizar una nueva valoración para cia o revivir una experiencia traumática pre-
identificar de manera oportuna los cambios via; es decir, la colaboración dependerá del
en el estado clínico y, por ende, de la prio- conocimiento que tenga la enfermera so-
ridad de atención previamente asignada e bre la experiencia del paciente y la forma
informarle la causa de la espera. Esta acti- en que lo aborde.
vidad demuestra al paciente la preocupa- • En algunas ocasiones, se subestima la in-
ción de la enfermera por su condición de formación subjetiva; no se le da total credi-
salud, la importancia de su bienestar emo- bilidad al sentir y a la manifestación del pa-
cional y permite el acompañamiento duran- ciente, hasta que la tecnología lo demues-
te esta fase de la atención. tre con resultados objetivos.

Admisión administrativa: no se puede des- La enfermera debe poner en práctica conduc-


conocer que el ingreso del paciente contem- tas sencillas pero significativas de respeto y
pla un trámite administrativo de gran importan- valor por el otro, tales como:

1437
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Saludar y llamar el paciente por el nombre; para definir la conducta terapéutica. Por con-
así mismo, presentarse. Este comporta- siguiente, debe permanecer en urgencias du-
miento muestra al paciente un trato indivi- rante un período de tiempo mayor, que mu-
dualizado y le permite reconocer al profe- chas veces se caracteriza por la incertidum-
sional que va a estar a cargo de la aten- bre y desesperanza al no observar mejoría y
ción. preocupación ante el trastorno que le causa
• Proporcionarle comodidad y privacidad la interrupción abrupta de la vida diaria. Sin
para realizar la valoración médica y duran- embargo, la mayor permanencia del paciente
te su permanencia en el servicio; ofrecerle en urgencias representa una oportunidad para
bata de examen, indicarle donde debe la enfermera de brindarle un cuidado integral
guardar sus pertenencias y brindarle una afectuoso que permita mitigar los sentimien-
sábana o cobija. tos de desesperanza, ansiedad y miedo y el
• Escuchar con atención lo que el paciente dolor.
necesita expresar acerca de su problema
y mostrarle interés y preocupación por lo Los desaciertos en el cuidado humano en que
que está sintiendo. se cae cuando el paciente está en esta área
• Respetar la individualidad del paciente, lo son:
cual significa que todo paciente debe ser
tratado como un individuo único, con su • El paciente se “codifica” como una habita-
propia historia personal, con sus atributos, ción o una patología.
necesidades y deseos propios. • Ausencia de calor, afecto y empatía en la
• Mantener informado al paciente y la familia. relación humana; dificultad en demostrar
Utilizar un lenguaje coloquial, palabras y los sentimientos hacia el paciente, lo cual
frases sencillas, comprensibles y acordes crea una distancia significativa entre el
con cada persona (el uso inadecuado de mundo objetivo del profesional y el mundo
terminología técnica conduce a malas inter- subjetivo del paciente.
pretaciones y aumenta la confusión del pa- • Deficiencia en la comunicación entre los
ciente). Explicar lo sucedido, lo que se va miembros del equipo de salud; esto hace
a realizar, cómo y cuándo se va a realizar difícil la integración de la información y, en
y resolver la mayoría de dudas. La pruden- ocasiones, se presta para inconsistencias
cia es fundamental en los comentarios que que generan confusión en el paciente y la
se hacen frente a la persona enferma. familia.
• Mantener contacto permanente con la fa-
milia; explicarle detalladamente la situa- En esta área en particular, la enfermera asu-
ción, permitirle acompañar al paciente en me un papel muy importante en los cuidados
los procedimientos en que es prudente que brinda a los pacientes:
hacerlo e involucrarla en los cuidados. Esto
le permite al paciente conservar parte de • Quitar o aliviar el dolor: escuchar y aten-
su privacidad, hábitos y costumbres. der la necesidad del paciente, valorar las
características del dolor, los factores que
Área de observación: el paciente es trasla- lo aumentan o lo disminuyen y administrar
dado a esta área cuando requiere vigilancia, el analgésico prescrito. Complementar con
descanso y nueva valoración posterior a la técnicas no farmacológicas como la distrac-
administración de medicamentos, la realiza- ción, la relajación, adopción de una postu-
ción de tratamientos o entrega de resultados ra cómoda, respiración lenta y profunda y

1438
CAPÍTULO XI: ATENCIÓN HUMANA DEL PACIENTE DE URGENCIAS

explicación del efecto de la ansiedad en el • Promover el sentimiento de utilidad y se-


empeoramiento del dolor. guridad de la familia, así como la capaci-
• Identificar tempranamente cambios en la dad de control de la situación actual. Resol-
evolución, significativos para la toma de ver sus dudas cuantas veces sea posible,
decisiones y conductas terapéuticas en for- puesto que la ansiedad dificulta el apren-
ma rápida que acortan el tiempo de estan- dizaje.
cia del paciente en urgencias. • Disminuir la ansiedad provocada por mitos
• Ser un puente de comunicación entre los y creencias erróneas, explicando siempre
miembros del equipo de salud y la familia. con claridad y sencillez los procedimientos.
• Establecer comunicación constante con el • Mantener una actitud flexible de visitas y
paciente y la familia, para disminuir los sen- permanencia de los acompañantes con el
timientos contradictorios y las presiones paciente.
psicológicas, emocionales y sociales resul- • Respetar las costumbres alimentarias y de
tantes del evento. Incluye la información higiene; aprender a conciliar los cuidados
telefónica; debe ser con tono amable, cor- de tal manera que no se ocasionen cam-
ta, clara y tranquilizante. Por el contrario, bios radicales y mucho menos impuestos.
frases de uso corriente como “está esta- • Reforzar positivamente los cuidados y elo-
ble, es lo único que le puedo decir” pueden giar los logros alcanzados para aumentar
generar mayor preocupación en la familia. la autoestima. Estimular a la familia para
• Mantener una actitud abierta y disposición que realice los cuidados junto con el pa-
para escuchar todo cuanto el paciente quie- ciente para darle más apoyo.
ra manifestar sin inquietarlo, interpretarlo • Controlar algunos factores ambientales
o juzgarlo, sin interrumpir ni dirigir la con- para favorecer el descanso y la tranquili-
versación y respetando los silencios y las dad: tendido de cama; cambio de las sá-
emociones que expresa. banas cuando éstas estén húmedas o su-
• Ofrecer un trato con cortesía, amabilidad y cias; cambios de posición; temperatura am-
una sonrisa. Estos comportamientos favo- biente adecuada (en caso de frío ofrecer
recen el acercamiento, la confianza y la cobijas y en caso de calor o presencia de
seguridad del paciente en la enfermera. fiebre dejar libre de ropas y hacer medios
• Mostrar gestos de solidaridad: decir una físicos antitérmicos, evitar exposición inne-
palabra de aliento, establecer un pequeño cesaria a corrientes de frío o calor); evitar
diálogo, propiciar una caricia, en otras pa- el exceso de ruido.
labras, dar una mirada humana; estas ac- • Aplicar las medidas de seguridad personal
titudes muestran afecto del profesional del paciente con el fin de disminuir el ries-
hacia el paciente. go de lesiones iatrogénicas por caídas: con-
• Realizar el acercamiento táctil afectivo, es servar arriba las barandas de la camilla,
decir, tocar su brazo, tomarlo de la mano, inmovilizar al paciente agitado, utilizar los
compartir una palabra; ayuda a tranquili- implementos de ayuda como escalerillas
zar el paciente ansioso o deprimido. (facilitar el ascenso y el descenso de la
• Ayudar a que el paciente enfrente sus mie- camilla) y ofrecer la silla de ruedas cuando
dos y preocupaciones con el fin de disminuir sea necesario.
la frustración causada por la enfermedad; • Respetar los ciclos circadianos; es decir,
brindarle un espacio para que exprese libre- permitir al paciente espacios de reposo y
mente, sus sentimientos y reflexiones como sueño durante el día mediante la adecua-
el miedo, la ira, la culpa, la tristeza. ción de la luz y disminución del ruido. En

1439
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

las horas de la noche propiciar el sueño; pecto a las aplicaciones de la biologia y la medici-
crear un ambiente para dormir (oscuridad na. España,1997.
y silencio), evitar actividades que interrum- 3. Davis A. Las dimensiones éticas del cuidar de
enfermería. Enfermería Clínica 2001; 9:21-34.
pan el descanso, como limpieza del área y
4. García A. La relación interpersonal en la interación
toma de signos vitales. enfermero paciente. Enfermería Clínica 1998;
2:42-44.
Salida: una vez se ha definido la salida o el 5. Leyden V. Introducción a la bioética: humanización
traslado del paciente a otro servicio del hos- de la asistencia sanitaria. Farmacia Clínica. 1997;
pital o a otra institución, la enfermera debe 14:319-323.
orientar al paciente y su familia sobre el pro- 6. Marques S. Cuidar con cuidado. Enfermería Clí-
cedimiento a seguir. Si el paciente sale a la nica. 1999; 5:266-268.
7. Sánchez Y, De la Fuente A. El arte de enseñar a
casa, se le debe expresar la alegría de ver su
cuidar, esencia en enfermería. Med Pal Madrid
mejoría, agilizar el proceso de salida, facilitar 2000; 7:157–160.
la movilización mediante el suministro del me- 8. Sanz J. Tecnología y beneficencia del enfermero.
dio adecuado y verificar que el paciente reci- Med Clin Barc 1999; 112:380–383.
be y comprende las recomendaciones para el 9. Smeltzer S, Bare B. Enfermería Medicoquirúrgica
cuidado en casa y los controles posteriores. de Brunner y Suddarth. Séptima edición.
Interamericana McGraw Hill. México, 1994.
Durante la reanimación aguda: si bien es
cierto que la prioridad en la atención de un INTERNET
paciente con una emergencia es salvar la vida 1. Armelin M. Apoio emocional as pessoas hospitali-
mediante maniobras de reanimación, en el zadas. Escola de Enfermagem de Ribeirão Preto-
momento oportuno, se debe propiciar el acom- SãoPaulo. Tese. 2000. http.//www.eerp.usp.br/
pañamiento del paciente por la familia y ofre- ilaenf/38/indexe.htm
cerle la información y las explicaciones nece- 2. Da Silva L. Cuidados de enfermería: el sentido
sarias que le permitan participar de manera para enfermeras y pacientes. Revista de Enfer-
efectiva en la toma de decisiones y la ayuda mería de Chile. Universidad de Concepción, 2002.
h t t p . / / w w w. c o l e g i o d e e n f e r m e r a s . c l / p d f /
al paciente.
cuidados_sentido.pdf
3. Furegato A. O que a população sabe e espera do
enfermeiro. Gaucha Enf 1999; 20: 80-90. http.//
LECTURAS RECOMENDADAS www.ufrgs.br/eenf/revistagaucha.htm
4. Pérez A. Problemas éticos en la atención de ur-
1. Aguarón M. Intervención de enfermería en la per- gencias. Revista Cubana de Enfermería. 1999;
sona en coma y su familia. Rol de Enferm 2000; 15:133-140. http.//bvs.cu/revistas/enf/indice.htm
23: 688–694. 5. Sadala M. Oferecimento de apoio oa paciente
2. Bayón C. Bioética y humanización en la medici- submetido a cirurgia cardiaca: abordagem huma-
na. Convenio para la protección de los derechos nizada do cuidar. Rev Soc Card 2000; 5:1 – 5.
humanos y la dignidad del ser humano con res- http.//www.revistasoceso.com.br

1440
CAPÍTULO XII: PREVENCIÓN Y CONTROL DE LOS RIESGOS OCUPACIONALES DEL PERSONAL DE URGENCIAS

CAPÍTULO XII

Prevención y control de los riesgos ocupacionales


del personal de urgencias

Martha Lucena Velandia, Enf.


Gerente, Clínica de Urgencias M. y T. Gutt
Fundación Santa Fe de Bogotá

E sta guía está dirigida al personal de sa-


lud que se desempeña en los servicios
de urgencias. Su principal objetivo es la crea-
PROGRAMA DE SALUD
OCUPACIONAL EN URGENCIAS
ción de conciencia en las personas sobre la El programa de salud ocupacional está cons-
importancia y la necesidad de asumir e im- tituido por los subprogramas de medicina pre-
plementar de manera responsable medidas de ventiva, medicina del trabajo, higiene y segu-
autocuidado para mantener la salud y minimi- ridad industrial y saneamiento básico y pro-
zar o neutralizar los riesgos inherentes al ejer- tección ambiental.
cicio de la profesión en el medio de los servi-
cios de urgencias y en otros escenarios.
MEDICINA PREVENTIVA Y DEL TRABAJO
Existe un amplio marco legal que regula la sa-
lud ocupacional y las instituciones de salud La medicina preventiva comprende el con-
realizan enormes esfuerzos en el desarrollo junto de actividades dirigidas a la identifica-
de programas de salud ocupacional. Sin em- ción precoz de los agentes no ocupacionales
bargo, en ocasiones se observa que el traba- que puedan causar enfermedad y al control
jador no participa activamente en la aplicación óptimo y rehabilitación integral del individuo
de las medidas correspondientes, lo cual tie- afectado.
ne un efecto negativo sobre sus resultados.
La medicina del trabajo estudia la enferme-
Merecen especial atención los riesgos ocupa- dad ocupacional cuyos efectos son general-
cionales que se relacionan con la exposición mente irreversibles y con frecuencia no se
a agentes biológicos y a factores psicosocia- manifiesta inmediatamente después de la ex-
les del ambiente laboral. Sin embargo, no se posición al riesgo sino que, en muchos ca-
pueden descuidar otros riesgos ya bien iden- sos, los signos y síntomas aparecen después
tificados, todo lo cual debe quedar incluido en de varios años. Las acciones básicas de este
un programa integral de salud ocupacional. subprograma son:

• Exámenes médicos de preempleo, perió-


dicos y de egreso.
• Evaluaciones para reubicación y pos inca-
pacidad.

1441
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

• Diagnóstico de salud. obesidad, sedentarismo, tabaquismo, alcoho-


• Vigilancia epidemiológica de los accidentes. lismo, drogadicción, enfermedades de trans-
• Educación. misión sexual, educación sexual, nutrición,
• Campañas de medicina preventiva. detección del cáncer, entre otros.

El examen médico del personal de salud debe Las campañas de medicina preventiva se rea-
hacer énfasis en algunos aspectos específicos lizan de acuerdo con las necesidades especí-
de la condición física, tales como la detección ficas del equipo de trabajo y comprende activi-
de enfermedades infecciosas y parasitarias, dades como vacunación, citología cervicova-
lesiones dermatológicas especialmente en ex- ginal, detección precoz de cáncer de próstata,
tremidades superiores, alergia al material de identificación de manifestaciones del estrés y
los guantes, lesiones de columna lumbar, hi- actividades deportivas, recreativas y culturales.
giene oral, várices. De especial importancia
es el registro de la inmunización activa contra
tétanos, difteria, varicela, ruebeola, sarampión HIGIENE Y SEGURIDAD INDUSTRIAL
y hepatitis y la historia de antecedente de acci-
dentes de trabajo con riesgo biológico. Tam- Comprende las actividades de reconocimien-
bién incluye la exámenes paraclínicos como to, evaluación y control de aquellos factores
serología, hemograma, antígeno de superfi- ambientales que se generan en el lugar de
cie para heaptitis B y anticuerpos contra he- trabajo y que pueden ocasionar enfermedades
patitis B. profesionales (higiene industrial) o accidentes
de trabajo (seguridad industrial). Además, el
Se deben implementar programas de vigilan- mantenimiento de un ambiente laboral seguro
cia epidemiológica para riesgo biológico, rui- mediante el control de actos y condiciones am-
do, agudeza visual, ergonomía y dolor lumbar. bientales potencialmente peligrosas. Se de-
El reporte y registro de los accidentes de tra- sarrolla con base en el Panorama de Facto-
bajo son de vital importancia para orientar efi- res de Riesgo. En la tabla 1 se resumen los
cazmente las acciones de seguridad dentro factores de riesgo para urgencias.
de un programa planeado que permita el con-
trol de las condiciones específicas y los actos
que causan los accidentes. SANEAMIENTO BÁSICO
Y PROTECCIÓN AMBIENTAL
La educación es la base de la prevención de
las enfermedades profesionales y accidentes Es el conjunto de acciones orientadas a pro-
de trabajo. El personal de salud debe recibir teger el ecosistema de la actividad hospitala-
capacitación permanente en bioseguridad, uso ria y la salud de los trabajadores y de la co-
apropiado de los elementos de protección per- munidad en general mediante actividades de
sonal, higiene postural y prevención de la pa- saneamiento básico.
tología lumbar y detección y control de facto-
res generadores de estrés. Para fomentar há- El personal de salud debe aplicar en forma
bitos y estilos de vida saludable se debe im- estricta las normas y procedimientos estable-
partir educación en temas de enfermedad ge- cidos para el manejo de residuos§ hospitala-
neral como diabetes, hipertensión arterial, rios.

1442
CAPÍTULO XII: PREVENCIÓN Y CONTROL DE LOS RIESGOS OCUPACIONALES DEL PERSONAL DE URGENCIAS

TABLA 1. PANORAMA DE FACTORES DE RIESGO (MODIFICADO DEL PROGRAMA DE SALUD OCUPACIONAL


DE LA FUNDACIÓN SANTA FE DE BOGOTÁ)

CLASE DE FACTOR DE FUENTE EFECTO MEDIDAS DE PRIORIDAD


RIESGO RIESGO GENERADORA CONOCIDO CONTROL
Físico Ruido • Manejo de equipos • Estrés • Medición del nivel de Baja
(camillas, sillas, • Irritabilidad ruido
instrumental) y • Educación del perso-
monitores. sonal de salud y
• Humana visitantes.
Químico Líquidos • Material de los • Lesiones en • Visita e inspección Baja
irritantes guantes la piel planeada
• Líquidos de • Irritación de la • Capacitación en pre-
desinfección vía respiratoria vención de lesiones
superior y manejo adecuado
de sustancias
• Evaluación médica
ocupacional
Biológico Virus, bacterias, • Atención de Contagio de • Implementación de Alta
hongos y personas con enfermedades normas de
ricketsias diversas directamente bioseguridad
patologías relacionadas con • Capacitación
• Manipulación de los agentes • Evaluación médica
material patógenos ocupacional
cortopunzante presentes en el • Vigilancia
ambiente de epidemiológica de
trabajo. bioseguridad
Ergonómico Carga dinámica • Postura de trabajo • Manifestaciones • Evaluación y Media
y de manipulación de pie de trauma mantenimiento
• Manipulación y acumulativo preventivo y
transporte de como dolor correctivo de
pacientes, equipos lumbar sistemas de
y material de • Problemas manejo y transporte
atención médica circulatorios de pacientes
periféricos • Capacitación de ma-
• Aumento del nejo de cargas y pos-
nivel de fatiga turas de trabajo
Psicosocial Alto grado de • Desarrollo de • Deterioro de las • Evaluación de Alta
responsabilidad, trabajo de atención relaciones clima laboral
trabajo con médica interpersonales • Motivación
apremio de tiempo, • Atención de • Omisión de • Participación en
jornadas público registros propios la gestión
prolongadas • Alto grado de de la labor • Incentivos
responsabilidad desarrollada (educación
• Baja continuada,
productividad reconocimiento)
• Deterioro en la
calidad del
servicio

1443
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

RECOMENDACIONES esfuerzos en procesos de inducción y en-


trenamiento de personal que no cumple el
PARA EL CONTROL DE RIESGOS perfil y no esté satisfecho con un cargo en
OCUPACIONALES el servicio de urgencias que no satisface
sus expectativas.
Riesgo psicosocial: el personal asistencial • Desarrollar un programa de inducción y
de urgencias es altamente vulnerable a pre- entrenamiento para el personal seleccio-
sentar el síndrome de estrés profesional o sín- nado, debidamente planeado y de duración
drome de Burnout, el cual se caracteriza por suficiente, sobre el manejo de pacientes de
cansancio emocional, despersonalización y urgencias y los procesos administrativos de
sentimiento de inadecuación profesional y per- la institución con miras a su mejor adapta-
sonal al puesto de trabajo. El cansancio emo- ción y óptimo desempeño.
cional se manifiesta por la sensación de ago- • Turnos fijos dentro de un mismo servicio.
tamiento físico y psicológico con fatiga cróni- Se ha visto mayor incidencia de burnout
ca y la sensación de no poder dar más de sí (fatiga profesional) en las enfermeras que
mismo a los demás. La despersonalización trabajan en turnos rotatorios en diferentes
consiste en una actitud de frialdad y distancia- servicios con respecto a las que trabajan
miento de los pacientes como mecanismo de- de modo fijo en el mismo servicio.
fensivo ante el agotamiento. La inadecuación • Evaluación periódica del desempeño y re-
profesional y personal al puesto de trabajo es troalimentación individual en forma positi-
un sentimiento de incapacidad para respon- va enfocada a la corrección de procesos,
der adecuadamente a las demandas labora- evitando involucrar aspectos propios de la
les, que deriva en comportamientos de aisla- personalidad o de las relaciones interperso-
miento social, bajo rendimiento laboral y es- nales de afecto o “amiguismo”. Se consi-
tado de ánimo disfórico. dera de gran importancia el reconocimien-
to permanente a la labor bien realizada.
Aunque en múltiples estudios se han descrito • Los estudios demuestran que el personal de
las causas del estrés profesional y las conse- enfermería concede gran valor a las relacio-
cuencias en la vida personal y el desempeño nes afectivas con otras personas, la aproba-
laboral no se identifican acciones claras para ción social, la estima de los demás, la valo-
la neutralización de los factores de riesgo. Las ración personal y profesional y la confianza
siguientes recomendaciones están basadas en sí mismo, aspectos que hacen parte muy
en la literatura y la experiencia sobre los as- importante de un buen ambiente laboral.
pectos que motivan al personal. La aplicación • Condiciones físicas y ambientales agrada-
corresponde al nivel gerencial, los superiores bles (iluminación, nivel de ruido, embelle-
inmediatos e individual de cada profesional cimiento, orden en el sitio de trabajo, dis-
con su esfuerzo de mostrar una buena actitud ponibilidad de recursos, entre otros).
hacia el trabajo y sus relaciones laborales. • Educación continuada: se debe brindar,
como un inversión de alto rendimiento, am-
• Denifición del perfil del puesto de trabajo plia oportunidad de formación y desarrollo
para la institución y selección de la perso- profesional a través de financiación, facili-
na más apropiada para desempeñarlo. Esto dad de tiempo para asistir y organización
permite la escogencia de un recurso huma- de eventos propios de educación continua-
no con talento y buena disposición para tra- da, en un esfuerzo compartido entre la ins-
bajar en urgencias y evita la pérdida de titución y el trabajador.

1444
CAPÍTULO XII: PREVENCIÓN Y CONTROL DE LOS RIESGOS OCUPACIONALES DEL PERSONAL DE URGENCIAS

• Retribución económica: este es un aspec- también afecta al personal de limpieza, se re-


to complejo, de múltiples variables y con laciona con los agentes patógenos presentes
poca intervención individual. Los estudios en la sangre.
demuestran que no es uno de los factores
críticos de satisfacción en el trabajo. La causa más frecuente de exposición es la
• Éxito profesional: incluye oportunidades de lesión por punción accidental con aguja con-
promoción y ascenso, independencia y au- taminada. En los Estados Unidos se estima
tonomía en el trabajo, desarrollo de la pro- que anualmente ocurren 800.000 punciones
pia iniciativa y labor creativa. La participa- y otras lesiones con objetos punzantes en tra-
ción en la toma de decisiones y la delega- bajadores de la salud y algunos estudios re-
ción adecuada refuerzan la valía profesional. velan que el 50% de las lesiones con agujas
• Seguridad en el servicio de urgencias: es ocurren en enfermeras. Según los Centers for
bien conocido que el personal de urgencias Disease Control and Prevention (CDC,
se encuentra expuesto a agresión física, Atlanta) cada año 5.100 profesionales sanita-
conductas amenazadoras y abusos verba- rios se infectan con el virus de la hepatitis B,
les por parte de pacientes y acompañan- de los cuales 250 se hospitalizan y 100 mue-
tes. La institución debe proveer medidas de ren. Los CDC también informan que las pun-
seguridad tales como vigilancia 24 horas (de ciones accidentales con agujas de cuerpo
ser posible por policía), capacitación sobre hueco suman el 86% de las exposiciones pro-
la forma de afrontar la violencia en el traba- fesionales al VIH. Además del Sida y de la
jo, implementación de una política institucio- hepatitis B existen otras enfermedades trans-
nal clara de no tolerancia a la violencia para mitidas por la sangre como hepatitis C, sífilis,
los pacientes y empleados y un mecanismo varicela zóster y malaria.
de reporte de los incidentes, información
adecuada a los pacientes sobre el proceso La contaminación también puede ocurrir con
de atención y el tiempo de espera y aque- sangre y secreciones que entran en contacto
llas medidas específicas a los riesgos que con la piel lesionada y las mucosas, lo cual
sean identificados en cada sitio. ocurre con frecuencia durante la resucitación
• El monitoreo de la motivación de los profe- en trauma y la ejecución de procedimientos
sionales debe incorporarse a los instrumen- con riesgo de salpicaduras. Algunos estudios
tos habituales de gestión para lograr un fun- demuestran que a pesar del conocimiento y
cionamiento eficiente de los servicios de los programas de educación para el personal
urgencias. Es fundamental establecer el de salud, no se utilizan de manera consisten-
nivel de motivación del trabajador de la te las medidas de precaución universal y los
salud en el área de urgencias, cuáles son elementos de protección personal.
las fuentes de motivación y en qué medida
la organización satisface sus expectativas. Existen algunas limitaciones relacionadas con
el costo del uso de dispositivos de seguridad
RIESGO BIOLÓGICO de alta tecnología. Sin embargo, el pilar de la
prevención de la enfermedad ocupacional por
Comprende la exposición a agentes infeccio- agentes biológicos es la capacitación, la apli-
sos transmitidos por contacto con los líquidos cación de las medidas de precaución univer-
corporales y secreciones del paciente y por la sal y el uso de los elementos de protección
vía aérea. El mayor riesgo de enfermedad pro- personal, elementos de dotación básica en
fesional en los trabajadores de la salud, que urgencias.

1445
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Manual de bioseguridad: la institución debe ble en el manejo del trauma, con todos los
contar con un manual de bioseguridad para pacientes. Siempre se debe prever la po-
consulta y programas de inducción y capaci- sibilidad de contaminación independiente-
tación del personal que incluya: mente del conocimiento de los anteceden-
tes patológicos del paciente.
• Diseño e implementación de un programa • Prohibición de re-encapsular agujas. Múl-
institucional de manejo de los residuos tiples estudios han demostrado que ésta
hospitalarios. es la principal causa de accidente.
• Programa preventivo de capacitación, vi- • Mantener siempre disponibles recipientes
gilancia del cumplimiento de las medidas rígidos para desechar elementos cortopun-
establecidas, evaluación, selección y uso zantes. En condiciones ideales, estos reci-
elementos de seguridad como parte del pientes deben contar con un mecanismo
plan de gestión de urgencias. para desempatar las agujas o cortopunzan-
• Vigilancia epidemiológica de los acciden- tes sin manipulación, y si es así, se debe
tes laborales por punción o lesión con ele- depositar el elemento completo. Además,
mentos cortopunzantes. Estimular el repor- se recomienda ubicarlos en el sitio donde
te de los accidentes ocurridos permite iden- se realiza el procedimiento.
tificar las causas, planear la educación y • Un requisito básico para el manejo de pa-
formular alternativas de solución; no se re- cientes es la vacunación del trabajador con-
comienda usar medidas punitivas. tra el virus de la hepatitis B, esquema com-
• Formulación de proyectos de investigación pleto, y control periódico de los niveles de
relacionados con la exposición del perso- anticuerpos.
nal de salud al riesgo biológico, costo- be- • Mantener disponibles soluciones antisép-
neficio de los programas y de la tecnología ticas y toallas desechables para el lavado
disponible para prevención. de manos.
• Fomento del uso de agujas y elementos • Contar con las canecas y bolsas suficien-
cortopunzantes con dispositivos de segu- tes para depositar los desechos: bolsa blan-
ridad incorporados (cierre hermético auto- ca para vidrio, bolsa verde para los residuos
deslizante), extensiones IV, llaves de tres comunes y bolsa roja para material bioló-
vías, agujas con mecanismo de propulsión gico.
para su desecho, entre otros, que dismi- • Capacitación del personal y seguimiento
nuyan la posibilidad de manipulación des- periódico de las prácticas observadas por
pués del uso. Se recomienda mantener un el personal para la prevención de los acci-
conocimiento actualizado sobre la mejor dentes y el control de los riesgos.
tecnología disponible y preferir su uso. Sin • Definición de una política institucional para
embargo, esto no debe ser una limitación la evaluación y tratamiento del trabajador
para utilizar correctamente los elementos por lesiones derivadas de un accidente la-
disponibles y las medidas básicas de pre- boral con exposición a riesgo biológico.
vención. • Capacitación y seguimiento del uso ade-
• Conocimiento y aplicación de las medidas cuado de los dispositivos de seguridad y
de precaución universal: lavado de manos, elementos de protección personal. En oca-
uso de guantes para la manipulación de lí- siones se observa temor a usar o mal uso
quidos y secreciones corporales, uso de ta- de los elementos debido a falta de conoci-
pabocas con visera en procedimientos con miento.
riesgo de salpicaduras, delantal impermea-

1446
CAPÍTULO XII: PREVENCIÓN Y CONTROL DE LOS RIESGOS OCUPACIONALES DEL PERSONAL DE URGENCIAS

Riesgos ergonómicos: la principal manifes- - Alcanzar un objeto: cogerlo, flexionar los


tación de los efectos crónicos de la moviliza- codos, inclinarse hacia atrás trasladan-
ción de los pacientes y equipos en las enfer- do el peso del cuerpo desde la pierna
meras es el dolor lumbar. Asimismo, se pre- más adelantada hacia la pierna opues-
sentan lesiones agudas causadas por postu- ta y jalar suavemente.
ra inadecuada y sobresfuerzo. El factor clave - No levantar o tirar de objetos que pue-
para la prevención es la utilización adecuada dan ser empujados o rodados.
de la mecánica corporal. Se deben observar - No estirarse para alcanzar objetos que
las siguientes medidas: se encuetran fuera del alcance.
• Como se ha descrito para los riesgos an-
• Usar calzado cerrado y de tacón bajo, con teriores, la capacitación y el seguimiento
suela flexible y antideslizante para lograr de la utilización de las medidas preventi-
una alineación corporal correcta y prevenir vas es fundamental.
caídas.
• Valorar la situación antes de levantar o
movilizar un paciente. Utilizar ayudas me- LECTURAS RECOMENDADAS
cánicas, tales como tablas y rodillos, y so-
licitar la intervención de otros colegas en 1. Álvarez MC. Motivación laboral en un servicio de
caso necesario. urgencias hospitalario. Enfermería clínica 2003;
• Aplicar las siguientes técnicas para levan- 13:16-25.
2. Council on Scientific Affairs. Preventing needles-
tar un paciente, empujar camillas y alcan-
tick injuries in health care settings. Arch Intern Med
zar un objeto: 2001; 161:929-936.
- Levantar un paciente de una silla: situar- 3. De la Peña E, Sanz JC, Garrido J, et al. Factores
se delante del paciente con los pies se- relacionados con el estrés profesional en perso-
parados aproximadamente 30 cm; esta nal de enfermería del área de la salud de Badajoz.
distancia proporciona soporte y estabi- Enfermería clínica 2002; 12:59-64.
lidad lateral y protege la espalda; colo- 4. Departamento de Seguridad e Higiene Industrial.
car un pie ligeramente adelantado con Programa de salud ocupacional. Fundación San-
ta Fe de Bogotá. Bogotá, 2001.
relación al opuesto para lograr estabili-
5. Distasio C. Violencia en el lugar de trabajo. Nursing
dad adelante y atrás; inclinarse delante 2003; 21:14-19.
del paciente flexionando las rodillas y 6. García D, Sánchez MD, Fernández M, et al. Identi-
apoyando el peso del cuerpo en la pier- ficación de estresores por enfermeras de atención
na más adelantada y mantener la es- especializada. Enfermería clínica 2001; 11:65-71.
palda recta. Sujetar la persona cerca del 7. Gilmore-Hall A. Violence in the workplace. AJN
cuerpo, contraer los músculos abdomi- 2001; 101:56.
nales y hacer la fuerza con los múscu- 8. Goldenhar L, LaMontagne A, Katz T, et al. The
intervention research process in occupational
los de los brazos y las piernas, exten-
safety and health: an overview. J Occup Environ
der las rodillas y mantener la espalda Med 2001; 43:616-622.
recta para levantar a la persona. 9. Jagger J, Perry J. Esperanzas realistas acerca de
- Empujar una camilla: situar las manos los dispositivos de seguridad. Nursing 2003; 21:32.
encima, flexionar los codos, apoyarse 10. Madan A, Raafat A, Hunt J, et al. Barrier
en ella trasladando el peso del cuerpo precautions in trauma: is knowledge enough? J
desde la pierna situada más atrás hacia Trauma 2002; 52:540-543.
la pierna de adelante y aplicar presión 11. McConnell E. Utilizando de forma adecuada la
mecánica corporal. Nursing 2003; 21:31.
suave y constante.

1447
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

12. Morrison W, Haas E, Shaffner D, et al. Noise, 13. Punnett L. Commentry on the scientific basis of
stress and annoyance in a pediatric intensive care the proposed occupational safety and health
unit. Crit Care Med 2003; 31:113-119. administration ergonomics program standard. J
Occup Environ Med 2000; 42:970-981.

1448
CAPÍTULO XIII: TÉCNICA ASÉPTICA

CAPÍTULO XIII

Técnica aséptica

María del Pilar Cuervo Polanco, Enf


Margarita González Calderón, Enf
Luz Stella Gil Sánchez, Enf
Claudia E. Cruz, Enf
Deisy Mora, Enf
Departamento de Enfermería
Fundación Santa Fe de Bogotá

PROPÓSITOS GENERALES

L os procedimientos de asepsia y antisep-


sia revisten especial importancia en los ser-
vicios de urgencia, donde el medio es especial-
Las recomendaciones categorizan de acuer-
do con la fuerza de la evidencia:

mente apto para el desarrollo de infecciones • Categoría A. Evidencia satisfactoria que


cruzadas. Tanto el personal médico como el sustenta las recomendaciones para su uso.
de enfermería debe estar familiarizado con los • Categoría B. Evidencia moderada que sus-
principios y normas de asepsia y antisepsia. tenta las recomendaciones para su uso.
• Categoría C. Evidencia insuficiente para
Esta guía está diseñada con el fin de unificar recomendar o no su uso.
criterios en el manejo de la asepsia y antisep- • Categoría D. Evidencia moderada que sus-
sia y disminuir los riesgos de infección. Las tenta excluir su uso.
recomendaciones están basadas en la eviden- • Categoría E. Evidencia satisfactoria que
cia, de acuerdo con los Centers for Disease sustenta excluir su uso.
Control and Prevention (CDC) de Atlanta, la
Guía de Intervención de Enfermería de Infec- De acuerdo con la calidad la evidencia se cla-
ciones Intrahospitalarias realizada en el mar- sifica en los siguientes niveles de evidencia
co del convenio entre el Instituto del Seguro (NE):
Social y ACOFAEN (Asociación Colombiana
de Facultades de Enfermería) y la Association • Categoría I: Evidencia obtenida de por lo
of Operating Room Nurses (AORN). menos un experimento clínico controlado
adecuadamente aleatorizado o de un meta-
Las recomendaciones se categorizan según análisis de alta calidad.
el nivel de evidencia (NE) existente, racionali- • Categoría II: Evidencia obtenida de por lo
zación teórica, aplicabilidad e impacto econó- menos un experimento clínico bien diseña-
mico, para así tener un punto de comparación do pero no randomizado, estudios analíti-
con un organismo líder en el estudio de la in- cos observacionales, estudios de casos y
fección intrahospitalaria y de reconocimiento controles, preferiblemente realizados en
mundial. más de un centro o en múltiples series de

1449
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

tiempo o estudios con resultados negati- Limpieza: es la remoción mecánica por me-
vos en experimentos no controlados. dio del agua y un detergente de toda materia
Los preferiblemente realizados en más de extraña, de las superficies en general. No eli-
un centro, o en múltiples series de tiempo mina los microorganismos pero reduce su
o estudios con resultados negativos en ex- número.
perimentos no controlados.
• Categoría III: Opiniones de autoridades res- Desinfección: proceso que elimina la mayo-
petadas basadas en la experiencia clínica, ría de microorganismos patógenos y no pató-
estudios descriptivos o reportes de comi- genos de objetos inanimados, exceptuando
tés de expertos. esporas, mediante el uso de agentes físicos
o químicos. Según la actividad antimicrobiana
La guía incluye las precauciones que debe ob- la desinfección se clasifica en:
servar el personal para la atención de los pa-
cientes, el manejo de las diferentes áreas hos- • Desinfección de alto nivel (DAN): procedi-
pitalarias y el manejo de equipos (endosco- miento que emplea agentes físicos o quí-
pios, instrumental básico y especializado). micos con actividad sobre bacterias en fase
vegetativa como el Micobacterium tubercu-
losis, hongos y virus con capa lipídica de
INTRODUCCIÓN tamaño medio, exceptuando las esporas.
• Desinfección de nivel intermedio (DNI):
Desde la era precristiana vienen ocurriendo acción germicida sobre bacterias en fase
cambios y acciones orientadas a la prevención vegetativa, virus con capa lipídica de tama-
de las infecciones, muchos de estos influen- ño medio (adenovirus, esporas asexuadas
ciados por la tradición; sin embargo, el empleo pero no clamidoesporas no Micobacterium
de los métodos de esterilización actuales, de tuberculosis).
las técnicas quirúrgicas novedosas (mínima- • Desinfección de bajo nivel (DBN): procedi-
mente invasoras) y el establecimiento de nor- miento mediante el cual se tiene efecto so-
mas para el comportamiento en los quirófanos bre bacterias en forma vegetativa, levadu-
han permitido controlar significativamente la ras y virus de tamaño medio pero sin ac-
aparición de infecciones. ción sobre el bacilo de la tuberculosis.

Descontaminación o desgerminación: es la
DEFINICIÓN DE TÉRMINOS reducción del número de microorganismos de
un material que ha estado en contacto con
Asepsia: ausencia de microorganismos que líquidos, fluidos corporales o restos orgánicos
pueden causar enfermedad. Este concepto in- de manera que pueda manipularse en forma
cluye la preparación del equipo, la instrumen- segura.
tación y el campo de operaciones mediante los
mecanismos de esterilización y desinfección. Esterilización: métodos químicos o físicos
para eliminar toda posibilidad de vida micro-
Antisepsia: empleo de sustancias químicas biana, incluidas esporas y bacterias altamen-
para inhibir o reducir el número de microorga- te termorresistentes. Este procedimiento está
nismos de la piel viva, las membranas muco- indicado en presencia de priones, hasta cuan-
sas o tejidos abiertos a un nivel en el cual no do se encuentre otro método más efectivo para
generen infecciones. estos casos.

1450
CAPÍTULO XIII: TÉCNICA ASÉPTICA

CLASIFICACIÓN DE ÁREAS no intactas, como por ejemplo los equipos de


terapia respiratoria, de endoscopia digestiva,
Las áreas institucionales se clasifican en crí- de hidroterapia y cistoscopia. Requieren des-
ticas, semicríticas o no críticas según el ries- infección de alto nivel (DAN).
go de infección generado por la actividad que
allí se realice. Elementos no críticos: son aquellos que entran
en contacto con la piel intacta, mucosa oral o
Se consideran áreas críticas o de alto riesgo parte alta del tubo digestivo o no hacen contac-
de infección, los quirófanos, las salas de par- to con el paciente; son ejemplo de artículos
to, la sala de pequeña cirugía de urgencias, no críticos las camillas hospitalarias, ropa de
la central de esterilización, las unidades de cama, tensiómetros, equipos para examen fí-
diálisis, áreas de preparación de soluciones sico y de electrocardiografía, entre otros. Es-
parenterales. tos elementos se deben someter a una desin-
fección de bajo nivel (DBN).
Son áreas semicríticas o de mediano riesgo
de infección, las unidades de cuidado intensi- A continuación se especifican las precaucio-
vo, servicios de hospitalización, servicios de nes que debe tener el personal para la aten-
alimentos, urgencias, morgue y oncología. ción de los pacientes y el manejo de las dife-
rentes áreas hospitalarias y equipos.
Dentro de las áreas no críticas o de bajo ries-
go de infección se encuentran las oficinas, pa-
sillos, salas de espera, consultorios, rehabili- PERSONAL
tación cardiaca, neurología, rehabilitación fí-
sica, neumología y medicina nuclear. LAVADO DE MANOS

La microflora de la piel contiene microorganis-


CLASIFICACIÓN DE ELEMENTOS mos residentes y transitorios. Los microorga-
nismos residentes sobreviven y se multiplican
Los materiales, artículos o equipos médico- en la piel; pueden convertirse en altamente
quirúrgicos pueden dividirse en tres categorías virulentos, mientras que la flora transitoria re-
de acuerdo con el riesgo relacionado con su uso. presenta contaminantes que pueden sobrevi-
vir solamente por limitados periodos de tiem-
Elementos críticos: son aquellos que penetran po. El lavado de manos con jabones y deter-
en cavidades internas o estériles del cuerpo gentes es efectivo para remover mucha de la
incluyendo el sistema vascular. Estos elemen- flora transitoria y eliminar e inhibir la flora re-
tos son instrumental quirúrgico, catéteres cen- sidente.
trales y periféricos, implantes, laparoscopios,
elementos cortopunzantes, prótesis valvula- El lavado de manos se define como una fric-
res, ortopédicos, entre otros. Deben ser some- ción breve y enérgica de las superficies enja-
tidos al pro-eso de esterilización y en casos bonadas, seguida por un enjuague bajo el
de emergencia se puede realizar desinfección chorro de agua. Su objetivo es reducir la flora
de alto nivel a los laparoscopios y artroscopios. residente (entendiendo por ésta la flora cutá-
nea normal de las manos y antebrazos, que
Elementos semicríticos: son todos los artícu- puede estar conformada por organismos pató-
los que entran en contacto con piel y mucosas genos como el Staphylococcus aureus, y

1451
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

también remover las bacterias transitorias (en- RECOMENDACIONES GENERALES


tendiendo por éstas microorganismos que se
adquieren por contaminación con el medio am- • El personal médico y de enfermería debe
biente, generalmente no patógenos). usar uñas cortas, limpias y sin esmalte. No
usar uñas artificiales. NE Categoría IIA.
• No usar jabones cosméticos en el área hos-
INDICACIONES pitalaria. NE Categoría IIA.
• El secado de las manos cumple dos funcio-
• Al llegar al hospital NE Categoría II. nes principales: retirar el exceso de agua y
• Antes de practicar maniobras invasivas los microorganismos muertos o inhibidos.
(venopunción periférica o central, catete- La toalla de tela actúa como objeto inani-
rismo urinario, aspiración de secreciones). mado que porta microorganismos; de ahí
NE Categoría IA. que cuando se reutiliza, algunos de ellos
• Antes de atender recién nacidos, ancianos y se adhieren a la piel de los próximos en
pacientes en estado crítico. NE Categoría II. secarse perdiéndose la acción microbicida
• Antes de atender enfermos con compro- del jabón. NE Categoría IIA.
miso inmunológico. NE Categoría IIA. • Antes de practicarse el lavado de manos
• Antes y después de manipular heridas qui- deben ser retiradas todas las joyas de las
rúrgicas, traumáticas o asociadas con un manos. No se debe portar joyas durante la
procedimiento invasivo. NE Categoría IIA. jornada de trabajo. NE Categoría IIB.
• Siempre que se entre en contacto con • El primer lavado del día debe incluir el la-
membranas mucosas, sangre y líquidos vado de las uñas. NE Categoría IIB.
corporales, así como con secreciones o • No usar cepillos durante el lavado de ma-
excreciones. NE Categoría IIA. nos. NE Categoría IIIB.
• Después de atender personas infectadas • Las personas con heridas, quemaduras o
o colonizadas con microorganismos epide- lesiones abiertas en las manos o brazos
miológicamente significativos, por ejemplo no pueden frotarse, porque esto aumenta
microorganismos multirresistentes. NE el conteo bacteriano, por consiguiente de-
Categoría IIA. ben abstenerse de participar en los proce-
• Después de toser, estornudar, limpiarse la dimientos quirúrgicos.
nariz o usar el sanitario. NE Categoría IIB. • Desocupar por completo los dispensadores
• Después de manipular objetos inanimados de jabón cuando adicione nuevo jabón.
como recipientes para medición de orina o
sistemas para recolección de secreciones. El lavado de las manos con jabón corriente
NE Categoría IIB. es efectivo para la remoción mecánica de mi-
• Antes de colocarse guantes e inmediatamen- croorganismos transitorios; cuando se realiza
te después de retirarlos. NE Categoría IIB. con agentes antimicrobianos destruye o inhibe
• Antes de manipular o preparar medicamen- el crecimiento microbiano (remoción química).
tos cualquiera que sea la vía de adminis- Es conocido que el principal factor que influ-
tración. NE Categoría IIB. ye en la efectividad del lavado quirúrgico dife-
• Antes de servir, administrar o ingerir algún rente al agente antiséptico es la técnica del
tipo de alimento. NE Categoría IIB. lavado.
• Entre el cuidado de una y otra persona
enferma. NE Categoría IIB.
• Al terminar labores. NE Categoría IIIB.

1452
CAPÍTULO XIII: TÉCNICA ASÉPTICA

PROCEDIMIENTO Gorro: debe colocarse antes del vestido de


mayo, el cabello debe quedar totalmente cu-
• Humedecer las manos, adicionar la solu- bierto para prevenir la caída de partículas en
ción indicada. NE Categoría IA. el vestido quirúrgico. Se debe cambiar si ac-
• Realizar un vigoroso frotamiento de las cidentalmente se ensucia.
superficies y la parte lateral de las manos
por lo menos durante 10 segundos segui- Vestido quirúrgico o “vestido de Mayo”: debe
dos. NE Categoría IA. tener las siguientes características; de tejido
• Enjuagar bajo una fuente de agua. NE fino, estrecho, fresco, limpio y representar una
Categoría IA. barrera efectiva.
• Secar las manos con toallas de papel. NE
Categoría IIA. Las políticas para el manejo del vestido quirúr-
gico varían entre hospitales, así como también
el uso de éste por fuera de las salas. El vestido
FRICCIÓN HIGIÉNICA DE LAS MANOS quirúrgico debe usarse exclusivamente dentro
de la institución. No debe utilizarse para salir
Procedimiento que se realiza entre paciente a zonas comerciales, a la casa o a la calle.
y paciente con el fin de remover la flora tran- Para circular dentro de la institución con el
sitoria de las manos utilizando soluciones an- vestido quirúrgico se utiliza una bata blanca
tisépticas con alcohol isopropílico con concen- encima, excepto en los casos en los cuales la
traciones entre el 70 y 90%. NE Categoría IIA. intervención practicada se considera infecta-
da o el vestido se haya manchado.
Se utiliza la solución con emolientes (gliceri-
na por ejemplo) frotando las palmas y zonas
Para reingresar a las salas de procedimientos
interdigitales durante 10 a 15 segundos.
quirúrgicos se puede utilizar el mismo vestido
No se debe realizar este procedimiento si: quirúrgico, excepto en las siguientes situa-
• No se ha realizado el lavado de las manos ciones:
al inicio del turno.
• Se ha entrado en contacto directo con flui- • Haber atendido a pacientes infectados o
dos corporales. En este caso se debe rea- haber realizado curaciones.
lizar el lavado clínico de las manos antes • El vestido quirúrgico esté sucio o man-
de realizar cualquier otro procedimiento. NE chado.
Categoría IIA.
Bata quirúrgica: las blusas estériles deben te-
ner material impermeable en la región frontal
ROPA QUIRÚRGICA y en las mangas. La parte delantera de la bata,
de la cintura hacia arriba hasta el nivel de los
La ropa quirúrgica adecuada es aquella que hombros y de las mangas hasta los codos se
representa una barrera efectiva entre la piel, considera área estéril. Muchas batas tienen
el cabello, la orofaringe, los pies y el ambien- un puño de poliester que no es resistente a
te quirúrgico. los fluidos, por lo tanto se hace necesario que
éste sea cubierto totalmente por el guante. Es-
Para disminuir la posibilidad de contaminación ta bata debe usarse única y exclusivamente
de la ropa de cirugía, es importante vestirse en el área quirúrgica.
en el siguiente orden:

1453
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Polainas: no se ha demostrado que el uso de Una vez se retiren los guantes se debe reali-
polainas disminuya el conteo de bacterias en zar nuevamente el lavado de las manos. NE
las salas de procedimientos quirúrgicos. Ideal- Categoría IIA.
mente deben ser de material impermeable y
cubrir totalmente los zapatos. Las polainas de-
ben colocarse después del vestido quirúrgico ÁREAS HOSPITALARIAS
e inmediatamente antes de ingresar a los qui-
rófanos. No se deben utilizar fuera de estas TRÁNSITO O CIRCULACIÓN
salas. Se puede prescindir de su uso utilizan-
do zapatos exclusivos para el quirófano. El acceso o el paso del personal, pacientes y/
o visitantes de un área a otra (crítica, semi-
Mascarillas faciales o tapabocas: las mascari- crítica y no crítica) dentro de la Institución debe
llas se utilizan como filtro bacteriano y se conta- cumplir las siguientes normas para la preven-
minan con saliva húmeda cargada de bacterias ción y control de la infección.
rápidamente después de colocadas. Las más-
• El acceso del personal, pacientes y/o visi-
caras de gasa o de tela no ofrecen en realidad
tantes a las áreas hospitalarias será limita-
protección adecuada; se deben utilizar preferi-
do en las zonas demarcadas con líneas de
blemente desechables que cubran totalmente
color rojo o avisos de “área restringida”.
la nariz y la boca. NE Categoría IIA. La máscara
• Los pacientes deben ser trasladados por
debe ser reemplazada si sangre o fluidos del
la ruta más directa al área de destino para
cuerpo la tocan. Si un procedimiento tiene la
evitar la contaminación cruzada. NE Cate-
posibilidad de salpicar la cara o los ojos, todo
goría IIB.
miembro del equipo debe usar protectores, ya
• Limitar el número de personas en las áreas
sean mascarillas con visera o gafas quirúrgicas.
críticas, principalmente durante la realiza-
ción de procedimientos (máximo 10 perso-
Las polainas, gorros y tapabocas solamente
nas), debido a que los niveles de conta-
se cambian en caso de salpicaduras de san-
minación microbiana son proporcionales al
gre y fluidos corporales.
número de personas que se encuentran en
el área. NE Categoría IIB.
Guantes: se deben usar guantes estériles para
ejecutar la manipulación de los elementos es-
tériles. Las manos únicamente deben tocar la LIMPIEZA Y DESINFECCIÓN
parte interna de los guantes; si se toca la par-
te externa del guante, éste se considera con- La limpieza de una institución de salud exclu-
taminado y debe ser cambiado. NE Catego- ye el uso de la escoba para barrer, debido a
ría IIA. Si los guantes contienen polvo para que muchos microorganismos depositados en
lubricar la postura, todos los vestigios de éste el piso, pueden hacerse viables si se les le-
se deben remover con una compresa húme- vanta por la acción de corrientes de aire que
da estéril. NE Categoría IA. se pueden formar.

En procedimientos no estériles se pueden uti- De acuerdo con la clasificación de las áreas


lizar guantes limpios de examen para protec- la desinfección de bajo nivel (DBN) se reco-
ción del trabajador de salud utilizando un par de mienda para áreas no críticas y la desinfec-
guantes por paciente. Los guantes no sustituyen ción de nivel intermedio (DNI) para las áreas
el lavado de las manos. NE Categoría IIB. semicríticas y áreas críticas. NE Categoría IIA.

1454
CAPÍTULO XIII: TÉCNICA ASÉPTICA

Los desinfectantes más comúnmente utiliza- No se recomienda el uso de la aspersión como


dos son los compuestos clorados y fenólicos; método de desinfección de áreas debido a la
estos últimos no se encuentran disponibles en falsa seguridad que se da al personal y al ries-
Colombia (Anexo 1). go de inhalación de sustancias tóxicas tanto
del personal como del paciente. NE: Catego-
No existe evidencia con relación a la rotación ría IB
de desinfectantes dentro de las instituciones
hospitalarias, únicamente se está realizando Área semicrítica: la limpieza y desinfección
este tipo de acciones en la industria farma- de la habitación se debe realizar cuando el
céutica. paciente no tenga visita. El aseo rutinario de
los patos, “riñoneras”, platones y orinales con-
La técnica de limpieza y desinfección reco- siste en lavar con agua y secar cada vez que
mendada incluye el empleo de los siguientes se usen. Estos elementos se someten a aseo
principios: terminal al egreso del paciente e incluye rea-
lizar inmersión en una solución de hipoclorito
• De arriba hacia abajo: iniciando por techos, de sodio a 50 ppm.
luego paredes y puertas y por último suelos.
• De adentro hacia afuera iniciando por el Limpieza terminal: es la desinfección reali-
lado opuesto a la entrada. zada una vez terminada la programación del
• Iniciar de lo más limpio y terminar en lo más día en quirófanos y en los servicios de hospi-
contaminado, evitando así la proliferación talización al egreso de cada paciente. Se debe
de microorganismos. seguir un procedimiento riguroso, limpiando
• Las superficies deben quedar lo más secas completamente todos los muebles y equipos.
posibles. La humedad favorece la multipli-
cación de los gérmenes. Limpieza semanal: es la desinfección que se
• Al cambiar de labor, es necesario lavar muy realiza en áreas críticas y no críticas de todos
bien los guantes y desinfectarlos o des- los elementos que hayan tenido contacto di-
echarlos si es necesario. recto e indirecto con el paciente. En salas de
• Retirar elementos y/o residuos hospitala- cirugía se retiran los elementos de cada quiró-
rios según las normas de bioseguridad y fano para hacer el aseo completo de la mis-
manejo de los mismos. ma y se limpia el interior de todas las alacenas
• Limpieza recurrente. y cajones; se revisa el material que se en-
cuentra almacenado y reesterilizan aquellos
Se considera limpieza recurrente la desinfec- cuya fecha de vencimiento ha expirado.
ción realizada después de cada procedimien-
to quirúrgico o la limpieza diaria de la habita-
ción ocupada. EQUIPOS E INSTRUMENTAL
Desinfección de áreas críticas: los quirófa- EQUIPOS DE OXIGENOTERAPIA
nos, salas de procedimientos (curaciones,
suturas) deben limpiarse con desinfectantes Cámaras de Hood: cambiar la cámara de
de nivel intermedio como limpieza terminal; Hood que esté en uso diariamente y someter-
asimismo, se deben limpiar y desinfectar una la a un proceso de limpieza con jabón líquido
vez cada semana. NE: Categoría IIB. desinfectante de nivel intermedio.

1455
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

Cánulas nasales y mascarillas faciales: LECTURAS RECOMENDADAS


cambiar mangueras, cánulas nasales o más-
caras faciales usadas entre un paciente y otro, 1. FELAC. Herida e infección quirúrgica. Curso avan-
puesto que las mangueras, cánulas nasales zado para cirujanos. Legis SA., Bogotá, 1999.
y máscaras faciales son de uso exclusivo para 2. Arroyave M, González G. Infección intrahospi-
talaria: prevención y control. Tercera edición. Co-
cada paciente. NE Categoría IB. Usar agua es-
mité de Control de Infecciones. Hospital Universi-
téril únicamente en los micronebulizadores. tario San Vicente de Paul. Medellín, 1999.
Desechar el material no reusable. Se reco- 3. Guideline for handwashing and hospital
mienda la desinfección de alto nivel y/o este- enviromental control. 1985. www.cdc.gov/ncidod/
rilización para material reusable (respiróme- hip/GUIDE/handwash_pre.thtm
tros portables, balón de ambú y otros disposi- 4. Centers for Disease Control and Prevention.
tivos de uso múltiple). Guidelines for isolation precautions in hospitals.
Atlanta, 1995.
5. Mangram AJ, Horan TC, Pesarson M, et al.
Cánulas de Guedell: después de ser emplea-
Guideline for prevention of surgical site infection.
das, sumergirlas en detergente enzimático du- 1999. www.cdc.gov/ncidod/hip/ssi/
rante 5 minutos. Lavar, enjuagar, secar y en- ssi_guideline.htm
viar a esterilización. 6. Gómez Muñoz JM, Echeverri de Pimiento S, Cuer-
vo Polanco MP, et al. Guía para la prevención de
Circuitos de ventilador: cambiar en un tiem- infecciones intravasculares asociadas con catéte-
po no menor de 48 horas circuitos respirato- res venosos centrales. Actual Enf 2000; 3: 34-41.
rios, incluyendo tubos y válvulas de exhalación 7. Laboratory Centers for Disease Control, Health
Canada. Infection control guidelines: hand
y humidificadores del ventilador que haya sido
washing, cleaning, desinfection and sterilization
usado con el mismo paciente. NE Categoría in health care. Supplement. 1998.
IA. En ausencia de filtro, los circuitos de ven- 8. División Médica. Circular interna: Guías de ma-
tilador deben ser cambiados cada 48 horas. nejo institucional. Fundación Santa Fe de Bogo-
En presencia de filtro, cada 8 días. NE Catego- tá. Bogotá, 1999.
ría IA. No esterilizar o desinfectar la parte in- 9. Ramírez MC, Díaz de Correa Y, Luna MA. Guía
terna de los ventiladores. NE Categoría IA. de intervención en enfermería basada en la evi-
dencia: Infecciones Intrahospitalarias. Instituto de
Seguros Sociales y Asociación colombiana de
Facultades de Enfermería. Bogotá, 1998.
INSTRUMENTAL QUIRÚRGICO 10. Larson E. Guideline for Hand washing and hand
antisepsis in health care settings. Reprinted with
El instrumental y elementos utilizados para permission Larson E. American Journal of Infection
procedimientos quirúrgicos deben ser some- Control 1995; 24:312-342.
tidos a un proceso de desinfección o esterili- 11. Johnson & Johnson Medical. Instrucción Progra-
zación dependiendo de la complejidad del pro- mada en Asepsia. Bogotá, 1994.
cedimiento y función del instrumento. 12. Secretaría de Salud de Bogotá. Conductas bási-
cas de bioseguridad: manejo integral. Ministerio
de Salud. Colombia, 1997.
• Desinfección de alto nivel: broncospopio, 13. Malagón G, Hernández L. Infecciones hospitala-
cistoscopio, colonoscopio y gastroscopio. rias. Primera edición. Panamericana. Bogotá, 1995.
• Esterilización: histeroscopio, laparoscopio, 14. Dirección de Salud Pública, Área de vigilancia en
toracoscopio, instrumental quirúrgico bási- salud pública. Lineamientos para la vigilancia, pre-
co, instrumental especializado y termosen- vención y control de las infecciones intrahospita-
sible, equipos neumáticos y eléctricos. larias. Secretaria de Salud de Bogotá. Bogotá,
1999.

1456
CAPÍTULO XIII: TÉCNICA ASÉPTICA

15. Vandebroucke-Grauls CMJE. Clean hands closer 30. Fundación Santa Fe de Bogotá. Protocolo de
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Effectiveness of a hospital-wide programme to practices of desinfection, preservation and
improve compliance with hand hygiene. Lancet Sterilization. Third edition. Blackwell Sciencie OPS.
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Editorial Imprentas Rápidas. Bogotá, 1995. 33. Krawol Hospitalaria. Auxilios para la este-rilización.
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23. Wenzel R, Edmond M, Pittet D, et al. Guía para el peutics. McGraw-Hill. 10 edition. New York. 2001
control de infecciones en el hospital. Edición ac- 38. Rutala WA. Guidelines for selection and use of
tualizada. Sociedad Internacional de Enfermeda- disinfectants. Am J Infect Control 1996; 24:313-
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1457
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

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(ASGE), the American College of Gastroenterology 48. Boyce JM, Pittet D. Guideline for hand hygiene in
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Association (AGA) and SGNA. care infection control pactice Advisory committee
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(ASTM). Standard practices for cleaning and force. MMWR. 2002; 51(RR16); 1-44.

1458
CAPÍTULO XIV: MEDIDAS DE BIENESTAR DEL PACIENTE CON URGENCIAS ONCOLÓGICAS

CAPÍTULO XIV

Medidas de bienestar del paciente


con urgencias oncológicas

Janeth Sánchez, Enf.


Especialista en Enfermería Oncológica
Fundación Santa Fe de Bogotá

INTRODUCCIÓN

L a mayoría de las enfermeras encuentran


pacientes con cáncer en algún momento
de su ejercicio profesional. Ojalá siempre es-
pia o radioterapia de cabeza y cuello, y entre
50% y 80% de los pacientes con cáncer avan-
zado experimentan dolor durante el curso de
tén dispuestas a tomar un papel activo en su su enfermedad.
cuidado, infundiendo esperanza, contribuyen-
do a mejorar su calidad de vida y optimizando La asistencia de la enfermera a los pacientes
el uso de los recursos de cada institución me- con urgencias oncológicas debe incluir una
diante una labor coordinada con otros profe- evaluación objetiva de su situación, siempre
sionales de la salud. teniendo en cuenta el entorno familiar y so-
cial. En esta guía se hace una revisión breve
Las urgencias más comunes son de origen de las causas más frecuentes de consulta
metabólico, como el síndrome de lisis tumoral, oncológica en urgencias y las correspondien-
hematológicas debidas a disfunción de la mé- tes intervenciones de enfermería.
dula ósea y las compresivas por obstrucciones
en diferentes sitios debidas a invasión directa
del tumor. Los avances en el cuidado clínico PRINCIPALES CAUSAS
de estos pacientes enfrentan a la enfermera DE CONSULTA
con dispositivos no usuales en los servicios
de urgencias, como infusores para quimiote- DISFUNCIÓN DE LA MÉDULA ÓSEA
rapia ambulatoria, catéteres venosos centra-
les implantados o terapia de soporte como la La producción normal de células hematopo-
administración de factores de crecimiento. yéticas se ve deteriorada, provocando neutro-
Todo esto constituye un reto para la enferme- penia, trombocitopenia y anemia.
ra en cuanto a brindar al paciente soluciones
oportunas y libres de complicaciones. Neutropenia febril: se desarrolla generalmen-
te entre 8 y 12 días después de iniciada la
En muchas oportunidades el paciente consulta quimioterapia, muchas veces acompañada de
por efectos adversos del tratamiento, tales procesos infecciosos. Se caracteriza por fiebre
como mucositis, la cual se presenta en casi el ≥38,5°C o >38°C en tres tomas de tempera-
40% de los pacientes que recibe quimiotera- tura en un periodo de 24 horas. Puede estar

1459
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

enmascarada en pacientes que reciben este- <10.000/mm3 puede producirse hemorragia


roides. Las manifestaciones clínicas son cam- espontánea en el tracto gastrointestinal o en
bios en el patrón respiratorio habitual, disnea, el sistema nervioso central y se requiere trans-
tos seca o productiva, dolor de garganta, cam- fusión de plaquetas. Se caracteriza por san-
bios en el patrón urinario habitual y molestias grado de encías, petequias, equímosis, san-
perirrectales. grado en boca, vagina, recto, uretra y nariz y
sangrado prolongado de los sitios de punción
venosa y heridas en piel.
INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA

• Toma de signos vitales (notificar al médico INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA


temperatura ≥37,8°C).
• Evitar la exposición a posibles fuentes de • Reducir el número de procedimientos inva-
infección: sores (aplicar presión en el sitio del proce-
- El paciente debe usar tapabocas duran- dimiento durante 5 a 10 minutos).
te el traslado a otros servicios. • Verificar la presencia de sangre en orina,
- Contacto con personas con enfermeda- heces y vómito.
des contagiosas. • Evitar las inyecciones intramusculares.
- Polvo y pulverizadores. • Evitar el estreñimiento e hidratar al paciente.
- Frutas y verduras frescas. • Evitar la manipulación rectal con enemas,
• Lavado de manos cuidadoso al atender al supositorios y termómetros.
paciente. • Notificar al médico sobre cefalea, especial-
• Examinar la piel (pueden estar atenuados mente frontal.
los signos y síntomas comunes de inflama- • Inspeccionar la piel buscando señales de
ción, enrojecimiento, calor, formación de sangrado y equimosis.
pus, edema y dolor) debido a la falta de • Transfusión con plaquetas según sea or-
leucocitos (neutropenia). denado.
• Aislar a los pacientes con un recuento de
leucocitos inferior a 1.000 /mm3. Anemia: la disminución de eritrocitos provo-
• Evitar el uso de sondas urinarias perma- ca fatiga, cefalea, mareos y disnea. Como el
nentes. organismo es capaz de compensar una dis-
• Habilitar el catéter venoso central (ver ac- minución gradual de eritrocitos, el paciente en
ceso venoso central). tratamiento o con anemia debido a la enfer-
• Toma de exámenes de laboratorio y hemo- medad puede no tener síntomas hasta que el
cultivos según la indicación médica, utili- hematocrito sea inferior a 30%. Se presenta
zando rigurosa técnica aséptica. síncope, taquicardia e hipotensión postural.
• Evitar exploraciones u otros procedimien-
tos rectales.
INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA
Trombocitopenia: esta complicación se pre-
senta generalmente a los 8-14 días después • Administrar oxígeno y analgésicos para la
de iniciada la quimioterapia, concomitante en cefalea según la orden médica.
muchas ocasiones con la neutropenia. Puede • Transfusión de glóbulos rojos.
provocar hemorragia, cuando la cifra de pla- • Asistir al paciente en las actividades
quetas es inferior a 50.000/mm 3. Con cifras diarias.

1460
CAPÍTULO XIV: MEDIDAS DE BIENESTAR DEL PACIENTE CON URGENCIAS ONCOLÓGICAS

DOLOR • Utilizar la vía más adecuada para adminis-


trar la medicación, teniendo en cuenta con-
Un 20 a 50 % de los pacientes con cáncer diciones como trombocitopenia, neutrope-
presenta dolor durante la fase inicial de la en- nia y la duración del efecto del medicamen-
fermedad, cifra que puede llegar a 90% en to. La vía subcutánea presenta muy bue-
los casos avanzados. El dolor es producido nos resultados en paciente crónico-terminal
en un 75% de los casos por el tumor mismo y y la acepta sin ningún inconveniente; se uti-
en un 10% por otras causas. Un paciente pue- liza en la región anterior del tórax, abdomen,
de tener simultáneamente varios tipos de do- brazo o el muslo. Previa asepsia local se
lor de diferentes fuentes: inserta un catéter número 20, 22 ó 24G en
el tejido celular subcutáneo, se adapta un
Procedimientos de diagnóstico tapón PRN® y se fija con esparadrapo. La
• Punción lumbar. duración promedio es de 4 días.
• Biopsia. • Administrar los analgésicos por horario
• Muestras de sangre. durante las 24 horas, puesto que presenta
mayor efectividad que administrarlos por
Cirugía necesidad.
• Dolor postoperatorio agudo. • Colaborar en generar un ambiente agra-
• Dolor postoperatorio crónico: mastectomía, dable y cómodo.
linfedema y toracotomía.

Quimioterapia MUCOSITIS
• Agudas: mucositis, mialgias, dolores arti-
culares, extravasación. La quimioterapia y la radiación afectan la rá-
• Crónicas: neuropatía periférica, seudorreu- pida frecuencia mitótica de las células bucales
matismo esteroideo. y lesiona el revestimiento de células epiteliales
del aparato gastrointestinal desde la boca
Radiación hasta el ano. Se inicia por lo general entre 7 y
• Agudas: quemadura de la piel, prurito y 14 días después del tratamiento y dura de 2 a
mucositis. 3 semanas.
• Crónicas: osteonecrosis, fibrosis, neumo-
nitis, úlceras intestinales u obstrucción.
INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA
Intervención de enfermería
• Evaluar en forma multidimensional el dolor; • El tratamiento se realiza de acuerdo con la
para determinar la intensidad usar la esca- severidad de las lesiones.
la análoga numérica, en colaboración con • Si existen signos de infección se toman
el médico. muestras para cultivo (cursa a veces en pa-
• Coordinar con el grupo de manejo del do- cientes neutropénicos).
lor de cada institución la administración de • Si la estomatitis es muy dolorosa, se admi-
analgésicos narcóticos si es apropiado. nistra analgésico en solución de hidróxido
• Escuchar al paciente, su familia o cuida- de aluminio y clorhidrato de difenhidramina
dores. o lidocaína viscosa (fórmula magistral).
• No retardar el tratamiento de un paciente • Se debe estimular al paciente a beber lí-
con dolor y utilizar las dosis de rescate. quidos en abundancia.

1461
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

SÍNDROME DE LISIS TUMORAL la médula espinal o a un colapso vertebral.


Alrededor de 5-10% de las personas con en-
Sucede especialmente en pacientes con tumo- fermedad metastásica desarrollan compresión
res de división rápida, leucemia o linfomas que de la médula espinal. Los tumores que con
reciben quimioterapia citotóxica; al destruir las mayor frecuencia la producen son carcinoma
membranas de muchas células tumorales, se de seno, pulmón, próstata y mieloma múlti-
libera el contenido intracelular al flujo sanguí- ple. Los signos y síntomas son dolor progre-
neo, lo cual eleva los niveles de potasio, fosfa- sivo de la espalda, el cual no se alivia con el
to y ácido úrico. Los niveles de calcio caen en reposo y se agudiza con el decúbito supino,
respuesta a la elevación de los niveles de fos- al toser o estornudar; déficit motor y altera-
fato; puede provocar falla renal y paro cardia- ciones sensoriales, especialmente de las ex-
co. Los signos y síntomas incluyen espasmos tremidades inferiores (adormecimiento y
carpopedales, dolor articular por acumulación parestesias), disfunción del intestino y la veji-
de ácido úrico, disuria, anuria y vómito. La ga y alteración de la función sexual.
función renal se disminuye por formación de
cristales de ácido úrico. Se presentan convul-
siones y taquicardia. INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA

• Coordinar la pronta realización de medios


INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA diagnósticos (RMN, mielografía).
• Informarse sobre el pronóstico del paciente.
• Toma de sangre para determinación de • Coordinar tratamiento con el médico on-
electrolitos y niveles de ácido úrico. cólogo.
• Restricción del potasio en los líquidos • Administrar esteroides para reducir el ede-
endovenosos y en la dieta. ma local y mejorar la función neurológica.
• Hidratación endovenosa para disminuir la • Coordinar el inicio de la radioterapia tan
concentración de ácido úrico en orina; tam- pronto se confirme diagnóstico, evitando
bién suele adicionarse bicarbonato sódico deficiencias neurológicas irreversibles.
a los líquidos endovenosos.
• Se administran diuréticos conjuntamente
con las medidas de hidratación para esti- SÍNDROME DE VENA
mular la excreción de potasio y fosfato. CAVA SUPERIOR
• Pueden utilizarse resinas de intercambio
catiónico (Kayaxelate o hidróxido de alu- Resulta de la obstrucción del drenaje venoso
minio) y se usa alopurinol para retirar el del tórax superior. La vena cava superior es
ácido úrico. muy vulnerable a la obstrucción por sus pare-
• Es un paciente para tratamiento en unidad des delgadas, baja presión y su localización
de cuidados intensivos. anatómica. Los ganglios linfáticos de gran ta-
maño o la extensión directa del tumor pueden
comprimir y obstruir la vena cava en forma
COMPRESIÓN MEDULAR extrínseca, o también interna por un trombo
(como en los casos de los catéteres venosos
Puede deberse a la presión directa sobre la centrales a permanencia). Más de 75% son
médula espinal, comprometiendo el riego vas- secundarios a tumores pulmonares de célu-
cular del área, lo cual da lugar a un infarto de las pequeñas o escamosas, y 10 al 15% son

1462
CAPÍTULO XIV: MEDIDAS DE BIENESTAR DEL PACIENTE CON URGENCIAS ONCOLÓGICAS

secundarios a linfomas. Los signos y sínto- • Lavado del equipo de punción con solución
mas son disnea, edema facial, dolor en el pe- heparinizada o solución salina.
cho, tos, disfagia y taquipnea. • Localización y fijación del reservorio con
los dedos índice y pulgar y punción con la
aguja diseñada para este fin.
INTERVENCIÓN DE ENFERMERÍA • Comprobar el retorno de sangre mediante
aspiración.
• Mantener la vía respiratoria permeable. • Curación con gasa doblada debajo de las
• Controlar el equilibrio de líquidos y electro- alas de la aguja, para mantener la aguja
litos. en un ángulo de 90°, y cubrir con apósito
• Vigilar signos vitales y nivel de conciencia. transparente.
• Evitar utilizar las venas de las extremida- • Registrar la fecha y la hora del procedimiento.
des afectadas, debido al riesgo de estasis • Conectar la infusión o tomar las muestras.
venoso, flebitis y trombosis.
• Administrar esteroides, diuréticos y antico-
agulantes. TRATAMIENTOS AMBULATORIOS
• Coordinar quimioterapia y radiación. ESPECIALES
En la última década los tratamientos del pa-
ACCESO VENOSO CENTRAL ciente con cáncer se han orientado a ser más
cómodos y menos agresivos en sus efectos.
Los pacientes de oncología pueden llevar im- Se utilizan medicamentos e infusores para
plantado un dispositivo de acceso venoso cen- medicamentos con los cuales puede llegar el
tral. Se debe siempre preguntar al paciente si paciente al servicio de urgencias.
lo tiene y utilizarlo para administración de líqui-
dos, sangre, infusiones y toma de muestras. Factores estimulantes de colonias: son fac-
El personal de urgencias debe estar capaci- tores de crecimiento que sirven de interme-
tado para el manejo de este tipo de catéteres, diarios en la proliferación, maduración, regu-
puesto que su uso es de primera elección en lación y activación de los granulocitos, macró-
el manejo de las urgencias oncológicas. fagos, linfocitos, monocitos, eritrocitos y pla-
quetas. Se conocen GM-CSF (Leucomax®) y
Aunque por lo general el acceso a un reservo- G-CSSF (Neupogen®). Se pueden adminis-
rio implantado provoca una sensación de pre- trar en forma endovenosa en DAD 5% en bolo
sión, más que de dolor, es posible que el pa- o por infusión corta y por vía subcutánea en
ciente prefiera la aplicación de un anestésico inyecciones diarias. Se asocian con mínima
local antes de la inserción de la aguja. El anes- toxicidad, pero pueden ocasionar fiebre, fati-
tésico tópico se aplica en forma abundante en ga, dolores musculares y erupción cutánea.
la zona mínimo una hora antes. A continua-
ción se describe la técnica de inserción de la Interferón: son proteínas que inhiben la pro-
aguja: liferación viral y aumentan la respuesta inmu-
nológica celular. En la actualidad se usa el
• Lavado de manos. Interferón-alfa en pacientes con melanoma, en
• Colocación de guantes estériles. algunas leucemias y en el sarcoma de Kaposi
• Preparación de la piel con solución anti- asociado con SIDA. El Interferón puede ad-
séptica para acceder al reservorio. ministrarse en dosis única intravenosa en bolo

1463
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

o por infusión, intramuscular y subcutánea; LECTURAS RECOMENDADAS


ésta última es la vía más común.
1. American Cancer Society. Libro de Consulta para
Enfermeras sobre el Cáncer. Asociación Españo-
la contra el Cáncer. Octava edición. Gráficas DIBE.
INFUSORES España, 1994.
2. Dawn C. Controle efectos adversos de la quimio-
Es una nueva modalidad para administrar me- terapia. Nursing 1992; 10: 8-16.
dicamentos citotóxicos en forma ambulatoria 3. Instituto Nacional de Cancerología. Guías de Prác-
por determinado tiempo; 12 ó 24 horas es lo tica Clínica en Enfermedades neoplásicas.
más usual. Al retirar el infusor, éste se debe Ramírez G, Patiño JF, Castro C y col (editores).
manejar teniendo en cuenta las precauciones Segunda edición. Bogotá, 2001.
de bioseguridad de desechos citotóxicos. 4. Kidd P. Problemas hematológicos y oncológicos.
En: Urgencias en Enfermería. Stinson P, Sturt P
(Editores). Editorial Océano. Barcelona.
5. Larouere E. El arte de acceder a un reservorio
RECOMENDACIONES GENERALES implantado. Nursing 1999; 17:24-26.
6. Saavedra P. Infusión subcutánea continua de
• Recordar que el paciente oncológico es es- medicamentos para el control de síntomas en el
pecial por la cronicidad de su enfermedad, paciente con cáncer terminal. En: Medicina Inter-
que está muy bien informado, que conoce na en Enfermería. Matiz H (Editor). Kimpres Ltda.
su tratamiento y que puede brindar ayuda Bogotá, 1992.
valiosa a la enfermera durante su atención.
• Informarse sobre el pronóstico del pacien-
te para evitar medidas que desmejoren la
calidad de vida.
• Si se desconoce algún catéter o dispositi-
vo que el paciente porte, buscar ayuda con
las personas que poseen experiencia en
el área para evitar errores.
• Vincular a la familia en el cuidado.

1464
CAPÍTULO XV: CONTROL DE SIGNOS VITALES

CAPÍTULO XV

Control de signos vitales

Sandra P. Penagos, Enf. de Urgencias


Luz Dary Salazar, Enf. Coordinadora de Enfermería
Fanny E. Vera, Enf. de Urgencias
Fundación Cardioinfantil
Bogotá

INTRODUCCIÓN

L os signos vitales constituyen una herra-


mienta valiosa como indicadores que son
del estado funcional del paciente.
cuantificados. Los cuatros principales signos
vitales son:
1. Frecuencia cardiaca, que se mide por el
pulso, en latidos/minuto.
El registro de los signos vitales no debe con- 2. Frecuencia respiratoria.
vertirse en una actividad automática o rutina- 3. Tensión (presión) arterial.
ria; los resultados deben ser el reflejo de la 4. Temperatura.
evaluación clínica confiable del paciente por
parte de enfermería, y su interpretación ade-
cuada y oportuna ayuda a la enfermera y al INDICACIONES
médico a decidir conductas de manejo.
• Al ingreso y egreso del paciente al centro
La determinación de los signos vitales tiene asistencial con el fin de registrar datos
particular importancia en los servicios de ur- basales de su estado de salud.
gencia, donde llegan pacientes con gran varie- • Cuando el paciente presenta cambios en
dad de cuadros clínicos, algunos en estado su condición funcional.
crítico. • Según la prescripción de enfermería o mé-
dica, en el paciente estable se requiere con-
trol dos veces en cada turno. En el pacien-
DEFINICIÓN te en estado crítico la monitorización de los
signos vitales es una acción permanente.
Los signos vitales son indicadores que refle- • Antes y después de un procedimiento diag-
jan el estado fisiológico de los órganos vitales nóstico o tratamiento invasor o no invasor
(cerebro, corazón, pulmones). Expresan de y de cirugía menor o mayor.
manera inmediata los cambios funcionales • Antes y después de la administración de
que suceden en el organismo, cambios que medicamentos que puedan afectar el sis-
de otra manera no podrían ser cualificados ni tema respiratorio o cardiovascular.

1465
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

PULSO ARTERIAL Medicamentos: los medicamentos pueden


afectar el pulso; algunos lo aumentan y otros
DEFINICIÓN lo disminuyen.

Es la onda pulsátil de la sangre, originada en Hemorragias: la pérdida de sangre mayor de


la contracción del ventrículo izquierdo del co- 500 ml aumenta el pulso. La taquicardia es
razón y que resulta en la expansión y con- signo de anemia aguda.
tracción regular del calibre de las arterias.
Estado emocional: las emociones como el
La onda pulsátil representa el rendimiento del miedo, la ansiedad y el dolor pueden estimular
latido cardiaco, que es la cantidad de sangre el sistema simpático aumentando la actividad
que entra en las arterias con cada contrac- cardiaca.
ción ventricular y la adaptación de las arterias,
o sea, su capacidad de contraerse y dilatar- Existen nueve puntos anatómicos para la pal-
se. Asimismo, proporciona información sobre pación del pulso.
el funcionamiento de la válvula aórtica.
Pulso temporal: la arteria temporal se palpa
El pulso periférico se palpa fácilmente en pies, sobre el hueso temporal en la región externa
manos, cara y cuello. Realmente puede pal- de la frente, en un trayecto que va desde la
parse en cualquier zona donde una arteria su- ceja hasta el cuero cabelludo.
perficial pueda ser fácilmente comprimida con-
tra una superficie ósea. Pulso carotídeo: se encuentra en la parte la-
teral del cuello entre la tráquea y el músculo
La velocidad del pulso (latidos por minuto) co- esternocleidomastoideo. No se debe ejercer
rresponde a la frecuencia cardiaca, la cual varía presión excesiva porque produce disminución
con la edad, sexo, actividad física, estado emo- de la frecuencia cardiaca e hipotensión. Tam-
cional, fiebre, medicamentos y hemorragias. poco, se debe palpar simultáneamente en
ambos lados para evitar la disminución del flu-
Edad: el pulso sufre variaciones desde el jo sanguíneo cerebral o, aun, paro cardiaco.
momento del nacimiento hasta la madurez y
la senectud. Pulso braquial: se palpa en la cara interna
del músculo bíceps o en la zona media del
Sexo: después de la pubertad el pulso es más espacio antecubital.
lento en el hombre que en la mujer.
Pulso radial: se palpa realizando presión sua-
Ejercicio físico: la velocidad del pulso aumen- ve sobre la arteria radial en la zona media de
ta con la actividad física. En los atletas en re- la cara interna de la muñeca. Es el método
poso la frecuencia aparece disminuida clínico más usado.
(bradicardia) debido al gran tamaño y fuerza
del corazón. Los atletas mantienen normal- Pulso femoral: se palpa la arteria femoral lo-
mente un estado de bradicardia. calizada debajo del ligamento inguinal.

Fiebre: aumenta el pulso por la vasodilatación Pulso poplíteo: se palpa realizando presión
periférica secundaria al ascenso de la tempe- fuerte sobre la arteria poplítea, por detrás de
ratura. la rodilla, en la fosa poplítea.

1466
CAPÍTULO XV: CONTROL DE SIGNOS VITALES

Pulso tibial posterior: se palpa la arteria tibial • Si el paciente ha realizado actividad física,
localizada por detrás del maléolo interno. es importante esperar entre 10 y 15 minu-
tos antes de controlar el pulso.
Pulso pedio: se palpa la arteria dorsal del pie • Valorar las características del pulso.
sobre los huesos de la parte alta del dorso del • Frecuencia: en la tabla 1 se presentan los
pie. valores normales de la frecuencia cardiaca
de acuerdo con la edad.
RECOMENDACIONES • Ritmo: el ritmo normal es regular. La irre-
PARA LA VALORACIÓN DEL PULSO gularidad está asociada con trastornos del
ritmo como fibrilación auricular. El pulso
• El pulso se valora mediante la palpación regular con pausas (latidos omitidos) o los
utilizando la porción distal de los dedos ín- latidos adicionales reflejan contracciones
dice y corazón. En el caso de los pulsos ventricualres o auriculares prematuras.
pedio y tibial posterior, se utiliza la mano • Volumen o amplitud: es la calidad o fuerza
derecha para palpar los pulsos en el pie de la sangre en cada latido. Se habla de
izquierdo, y viceversa. amplitud normal, cuando el pulso es fácil-
• El pulso cardiaco apical, y los tonos car- mente palpable, no desaparece de mane-
diacos, se valoran mediante auscultación ra intermitente y todos los pulsos son simé-
con fonendoscopio. tricos, con elevaciones plenas, fuertes y
• Palpar cada pulso en forma individual y rápidas. El pulso disminuido, débil, filiforme
evaluar frecuencia, ritmo, amplitud y contor- o hipoquinésico se asocia con disfunción
no, y en forma simultánea para detectar ventricular izquierda, hipovolemia o esteno-
cambios en la sincronización y la amplitud. sis aórtica. Por el contrario, el pulso fuerte,
Comparar los pulsos de las extremidades rápido o hiperquinésico (pulso saltón) refle-
del mismo lado y del contralateral con el ja la eyección rápida del ventrículo izquier-
fin de detectar variaciones. Los pulsos asi- do, como en el caso de la regurgictación
métricos sugieren oclusión arterial. aórtica crónica. La disminución de la ampli-
• El paciente debe adoptar una postura có- tud del pulso, a veces tan marcada que el
moda y relajada. pulso desaparece, se denomina pulso pa-
• La enfermera debe verificar si el paciente radójico (derrame pericárdico). Cuando hay
ha recibido medicamentos que afectan la irregualridad en el pulso pero a cada pulsa-
frecuencia cardiaca. ción fuerte sigue una débil se trata de un

TABLA 1. VALORES NORMALES DE FRECUENCIA CARDIACA

EDAD PULSACIONES POR MINUTO


Recién nacido 120 – 170
Lactante menor 120 – 160
Lactante mayor 110 – 130
Niños de 2 a 4 años 100 – 120
Niños de 6 a 8 años 100 – 115
Adulto 60 – 80

1467
GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS

pulso alternante; este tipo de pulso se en- FASES DE LA VENTILACIÓN


cuentra en casos de acentuada degenera- La ventilación es el proceso mecánico de la
ción de la fibra miocárdica. movilización de aire entre el interior y el exte-
• Elasticidad: es la capacidad de expansión rior de los pulmones para introducir oxígeno
o de deformación de la pared arterial bajo al alveólo y expeler anhídrido carbónico. Se
la onda pulsátil. Una arteria normal, por lo afecta por las propiedades anatómicas de la
general, es lisa, suave y recta. La elastici- pared torácica, la cavidad torácica, las vías
dad refleja el estado de los vasos sanguí- aéreas superiores e inferiores.
neos.
Inspiración: fase activa; se inicia con la con-
tracción del diafragma y los músculos inter-
ALTERACIONES DEL PULSO costales.

Taquicardia sinusal: frecuencia cardiaca que Espiración: fase pasiva; depende de la elasti-
no sobrepasa los 160 latidos por minuto. Se cidad pulmonar.
debe al estímulo del automatismo sinusal por
la excitación del simpático; se observa en la En condiciones patológicas intervienen los
fiebre, hipertiriodismo, falla cardiaca y shock. músculos accesorios de la inspiración (esca-
lenos y esternocleidomastoideo) y de la espi-
Taquicardia paroxística: se inicia en forma ración (abdominales).
súbita y la frecuencia está por encima de 160
latidos/min. Se manifiesta con dolor precordial, FACTORES QUE INFLUYEN
angustia y palpitaciones. • El ejercicio por aumento del metabolismo.
• El estrés.
Bradicardia sinusal: las pulsaciones oscilan • El ambiente cuando hay aumento de la
entre 40 y 60 latidos/minuto. Se observa en temperatura.
pacientes con hipertensión endocraneana o • Ascenso a grandes alturas, debido a la dis-
con impregnación digitálica. minución de la presión parcial (tensión) de
oxígeno en el aire ambiente.
Bradicardia por bloqueo auriculo-ventricular • Medicamentos que disminuyan la frecuen-
completo: se presenta con pulsaciones entre cia respiratoria.
30 y 35 latidos/minuto. Es producida por fe- • La edad.
nómenos asociados con la contracción de las
aurículas y ventrículos y se manifiesta por RECOMENDACIONES
estado sincopal. PARA LA VALORACIÓN
• Se valora el patrón respiratorio del pacien-
te. El patrón respiratorio normal se carac-
RESPIRACIÓN teriza por ser suave, regular, con frecuen-
cia de 12 a 20 respiraciones/minuto en el
DEFINICIÓN adulto, y presencia de suspiros ocasiona-
La respiración es el proceso mediante el cual les. Normalmente, la respiración no exige
se toma oxígeno del aire ambiente y se ex- esfuerzos y es silenciosa.
pulsa el anhídrido carbónico del organismo. • Frecuencia respiratoria: en la tabla 2 se
El ciclo respiratorio comprende una fase de presentan los valores normales de frecuen-
inspiración y otra de espiración. cia respiratoria.

1468
CAPÍTULO XV: CONTROL DE SIGNOS VITALES

TABLA 2. VALORES NORMALES DE FRECUENCIA RESPIRATORIA

EDAD RESPIRACIONES POR MINUTO


Recién nacido 30 – 80
Lactante menor 20 – 40
Lactante mayor 20 – 30
Niños de 2 a 4 años 20 – 30
Niños de 6 a 8 años 20 – 25
Adulto 15 – 20

HALLAZGOS ANORMALES prolongada como en los pacientes con asma


bronquial y enfisema pulmonar.
Bradipnea: es la lentitud en el ritmo respira-
torio con una frecuencia inferior a 12 respira- Tirajes: indican obstrucción a la inspiración;
ciones por minuto. Se encuentra en pacientes los músculos accesorios de la inspiración
con alteración neurológica o electrolítica, in- traccionan hacia arriba y atrás, aumentando
fección respiratoria o pleuritis. el diámetro de la cavidad torácica.

Taquipnea: frecuencia respiratoria persistente Ortopnea: es la incapacidad de respirar có-


superior a 20 respiraciones por minuto; es una modamente en posición de decúbito.
respiración superficial y rápida. Se observa en
pacientes con dolor por fractura costal o pleuritis. Respiración de Kussmaul: respiración rápi-
da (frecuencia mayor de 20 por minuto), pro-
Hiperpnea o hiperventilación: respiración funda, suspirante y sin pausas. Se presenta
profunda y rápida de frecuencia mayor a 20 en pacientes con insuficiencia renal y acidosis
respiraciones/minuto. Es producida por ansie- metabólica.
dad, ejercicio, alteraciones metabólicas o del
sistema nervioso central. Respiración de Cheyne-Stokes: hiperpnea
que se combina con intervalos de apnea. En
Apnea: es la ausencia de movimientos respi- niños este patrón es normal. En adultos, se
ratorios. presenta en lesión bilateral de los hemisferios
cerebrales, ganglios basales, bulbo, protube-
Disnea: sensación subjetiva del paciente de rancia y cerebelo.
dificultad o esfuerzo para respirar. Puede ser
inspiratoria o

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