Hacia una ética lesbofeminista o lésbico feminista plantea Celia Amorés ignifica hablar xiste una ética lésbi- e co-femiinista? Sin embargo. habria que preguntaros inicial- G ee aa de una ética feminista? Para darnos una respuesta aproximada Amords distingue a la ética en dos tipos; éticas del perfec jonamiento individual o éticas espe- cializadas “las directamente (encaminadas) en a construccién de un paradigma de formas de conducta que se pretende universalizable y éti- cas para crear las condiciones de posibilidad en las que toda ta especie humana podria asumir realmente un protagonismo retomando a Marx- éticas del reino de la necesidad. Una ética feminista es una ética del reino de la necesidad... es una lucha por un tipo de sociedad en ia que TODOS los indi- viduos puedan plantearse sus problemas en términos éticos” -segiin Celia Amorés. Para la filosofa, Ie ética que ha pre~ dominado hasta nuestros dias, sobre todo en las sociedades occidentales ha sido la éti del perfeccionamiento individual “en donde la mujer no prefiere -no debe ni puede cle- gir- posibilidades de vida individuali zadas... no se le da es Propuesta estereotipada a seguir en base a una definicién social a partir de sus carac teristicas bioldgicas Amor6s asevera que las éticas son consttuidas “por tos que puedan elegir 0, sino una van dirigi u vida, pues, no es su jeto se le relega al estatuto de Al quedar fuera de la iempre, entre lo natural y Por ello que- pertenece por excelencia al dominio qu la ultra sobrenaturd camente se conceptualiza como el establece de aquello que la domini ra s pres- cripciones en el campo al o define la ideologia patriar- cal. Por lo que auna 2 nani ieee eeecepto de la universalidad, denunciar la univer- salidad que se encuentra conto presupwesto ideolégico En cuanto a una ética lésbico-feminista, son las mismas lesbianas, que se han identifiea- do con el feminismo como corriente de pen: samiento y lucha social, pero con épticas dife- rentes, las que nos proporcionan su reflexiGn y propuesta, Fundadora del movimiento lésbico en ‘México, con 20 aftos de lucha ligada al movimiento feminista Yan Maria Yaoy6lotl Castro, sostiene que la ética lésbico-feminista estd en proceso de construccién y explica por qué ‘La FILOSOFIA (porque hay diferentes filias) occidental, tradicionalmente se ha fin- damentado en tres ejes; que es el bien, la ver- dad y la belleza, 0 sea la ética, la logica y ta estética o el mundo del comportamiento, el ‘mundo del conocimiento y el mundo de la sen- sibilidad y en términos mds cotidianos; la ‘moral, la ciencia y el arte. Y esta FILOSOFIA, es wna forma de pensamiento netamente patri- carcal, es una forma de pensamiento judeo-cris- tiana-islamica pero también una forma de pen- samiento heterosexual Para ser mas explicita, la licenciada en Filosofia y Letras, acota, “esta FILOSOFIA tiene cinco limitantes: la division o frag- mentacién de la realidad en dos polaridades, ‘aunque sabemos que la realidad es multifacéti- cay dimensional por lo que la filosofia patriar- cal da wna visién falsa de esa realidad. La segunda limitaciGn para Yan Marfa es, excluyente porque no sélo existe el bien, la ver- dad y la belleza sino que también existe la mat- dad, la falsedad y la fealdad, La tercera limi- tante es invalidatoria y desvalorativa y esto va dirigido al porque tas lesbianas somos invisi- bles, por lo que nuestra lucha es por la visibili- dad, porque existimos. La cuatta impone su vision como la verdad absoluta, inica por lo que califica, determina, desecha al polo ‘opuesto seftaldndolo de negativo, 0 sea prove- niente de la naturaleza. Y el quinto, construye tun universo conceptual que no corresponde a la realidad, choca con la realidad por lo que provoca un gran conflicto interno en el indivi- duo cuando ve y vive esa realidad” Por lo que para Yaoydtotl, la ética como parte de la filosofia es sexista, racista, Clasista, imperialista y generacionista. Sin ‘embargo Yan Maria Castro no se queda en la critica y vaa la propuesta. Para ella habria que cuestionar esa “Filosofia traducida como la verdad absoluta, el bien y la voluntad de Dios en la tierra mediante su representacién; el Estado, de donde deviene la Familia y su estructura. Es decir Iglesia, Estado y Familia como valores, de una deduccién del concepto universalizante de bien ético por lo que yo pro- pongo es interrelacién entre lo positive y lo negativo, una ética que revalore lo negativo 0 sea lo que se entiende por naturaleza’ Para la elaboracién de una ética “les- bofeminista”, como la denomina Yan Marfa, estaria basada en cinco perspectivas: “Retomar del materialismo hist6rico dialéctico su pro- puesta de abolir la lucha de clases; Del orien talismo (del budismo original y del toltequismo en nuestra sociedad) que articula el bien y el ‘mal, reivindica el politetsmo como muchas ver~ dades, por lo que no habria un s6lo modo de conducta tinica y exclusivo y por la reivindi- cacién del matritiniado por la revaloracién det cuerpo y pensamiento de la mujer, de lo apareniemente negativo para el patriarcado, la mistificacién. También retomaria del anarquismo su concepto critico hacia el Estado visto como et conjunto de instituciones de control, opresién y represion social; Del feminismo como discurso revolucionario a partir de su consigna de lo personal es politico, es decir, a partir de su lucha por la liberacién de la mujer, pero no el jeminismo de unas cuantas que se alia con el Estado cuya pretensiOn es institucionalizar las demandas de las mujeres y empoderar a las menos con financiamientos que burocratizan la lucha de las mujeres. Hasta llegar al lesbofe- minismo, como un discurso transgresor que derrumbe los pilares de la sociedad patriarcal; la familia, el contrato matrimonial, la mater- nidad y la heterosexudlidad como ejercicio linico y obligatorio Cabe recordar que la propuesta de ela- borar una ética Iésbico-feminista se ha venido gestando desde 1993 a rafz de las jornadas rebeldes de Mar de Plata, Argentina por inicia- tiva de Amalia Fischer, segdin nos informa ‘Norma Mogrovejo. Entrevistada por fem la feminista peruana, residente en México y cuyo propésito es aportar y provocar la elaboracién colectiva de una teoria lésbica en Latinoamérica; la ética Késbico-feminista estaria encaminada, a su juicio, “a recobrar la memo: ria historica en la bisqueda de wna identidad colectiva que incluya las necesidades y la re- 30resentatividad de los sujetos sociales; la visi bilidad lésbica por ejemplo. Asimismo pro- pone, la recuperacién del discurso transgresor del feminismo original que pugnaba por una transformacién real de las relaciones sociales y la aceptacion de la opeién sexual como un derecho politico. El tema del lesbianismo afiadi la socidloga peruana, deberia aparecer como una demanda y reconocimiento central, no como un apéndice de la agenda del heterofeminismo que hha valorado en los iiltimas 10 aitos mds aspec- tos economicistas, mientras se descalifican y obvian demandas referidas a lo personal, al cuerpo, a la sexualidad. Ahora la solucién es pagar un psicoanalista o esperar dias y horas ara que te den una cita en una organizacién no gubernamental dedicada exclusivamente a la salud reproductiva. Hoy dijo, estamos frente a una militancia feminista pagada por el Estado y sus instituciones 0 agencias inter- nacionales que crean una nueva clase politica que no hace inter- locucién con el sector que segiin representan. Estamos {frente a una trampa tec- nocrética que copta y seduce a seudolideres quienes a través del ejercicio del poder traicionan el voto, la confianza _ciudadana al instalarse en las alias esferas del poder patriarcal y no recono- cer ni interlocutar con quienes dieron ese voto de confianza. Con el propésito de averiguar tal aseveracién, intentamos entrevis- tar a la aludida, a la actual diputada del Partido de la Revolucién Democrética PRD, Patria Jiménez, quien por cier- to no se present6 a nuestra cit Cuestidn de ética, tal vez. Por su parte Mariana Po, joven feminista quien asumnié tener una fuerte influencia del anarquis- mo. A sus 30 afios de edad, Ia editora de la revista LesVoz, inform6 que este asunto de la ética, es una preocupacidn que se esté plantean- do al interior de varios grupos lésbico femi- nistas. Desde su punto de vista, Mariana con- sidera que la ética lésbico-feminista “es un Proceso, una revisidn que debe de partir desde SIC NE la modificacién de las raices sociales y cultu- rales predeterminadas por una ideologia domi- nante que dio origen al Estado. Un Estado como concepcién y realidad absoluta. Un Estado protector que a cambio de fortalecer intereses econdmicos personales, copta ‘movimientos sociales mediante la individuacion de la lucha social de las mujeres Otro aspecto que segtin se estén plante~ ando las lesbianas interesadas por una nueva Gtica, es la revaloracién del cuerpo de la mujer Junto con sus capacidades fisicas y mentales en Jas que el lesbianismo se reconozca como un discurso y una prdctica transgresoras de la moral vigente. Por un cuerpo con derecho a la vida y al placer”. Finalmente y también en entrevista por separado la comunicéloga Adela Mabarak del grupo de video Telemanita coincidié en que la ica lésbico-feminista esta en proceso, la diferen- ia es que ella cree que la elaboracién de ésta “deberia ser no solo un proyecto personal sino en conjunto, pero en la cual cada individua sea representada, incluida. Una ética que contem- ple el didlogo y la socializacién en conjunto, es decir por la presencia, la visibilidad contra la ausencia det lesbianismo como el ser y estar de un conjunto de mujeres frente a una realidad hetero- sexista ‘que niega su existencia Para concluir citaremos nuevamente a la fildsofa Celia Amords de su libro, Hacia una critica de la razon patriarcal: q ‘Una ética feminisia se lantea ante todo como critica de la ética. No puede sersino denuncia de la ficcién de universalidad que se encuentra como resupuesto ideoldgico en la base de las distintas éticas que se han propuesto a través de la historia, sobre todo de las éticas filoséficas. No puede ser sino critica de la actitud acritica de la ética que construye su destinatario sobre (a base de la mala abstraccién -la de una universalidad sin deter ‘minaciones de contenido o un contenido sin universalidad- y la mistficacién”. 31