TENORIO LÓPEZ LIZBETH

“EL RELATO”

M2C2G18-105
 Relato sobre “El Principito”
Todo comenzó cuando decidí salir de mi pequeño
planeta y descubrir nuevos planetas, abrir nuevos
horizontes, conocer personas y hacer amigos,
haciendo así el hallazgo de la morada de los
hombres...
¡Buenos días!- Saludé
Me encontraba en un jardín inmenso lleno de rosas.
¡Buenos días!- contestaron éstas.
Me asombré al ver que todas eran igual a mi flor, la
que dejé en mi planeta.
¿Quienes son ustedes? Pregunté.
-Somos las rosas. Respondieron.
Al verlas me decepcionó mucho; ya que mi flor me
había dicho que era la única de su especie en todo el
universo.
Pensé en la reacción que ella hubiera tenido al ver
todo lo que había descubierto y pensé:
“Me creía rico con una flor que creía única y resulta
que no tengo más que una rosa ordinaria, eso y mis
tres volcanes que apenas me llegan a la rodilla y uno
de estos que quizá esté extinguido para siempre;
Realmente no soy un gran príncipe”
Entonces apareció el zorrito:
¡Buenos días! Saludó el zorro.
¡Buenos días! Dije cortesmente y lleno de curiosidad.
¡Estoy aquí, bajo el manzano! Dijo la voz.
¿Quién eres tú? Pregunté.

-Soy un zorro.
¡Ven a jugar conmigo! Le propuse; ¡Estoy muy triste!
Y el me contestó que no podía jugar conmigo porque
no estaba domesticado
¡Ah, perdón! Me disculpé y traté de ocultar mi
decepción; pero pensé bien todo y le pregunté:
¿Qué es “domesticar”?
-Tú no eres de aquí- ¿Qué buscas?
Yo suspiré y le respondí: -Busco a los hombres y de
nuevo pregunté lo que no me contestó: ¿Qué es
“domesticar”?
-Los hombres tienen escopetas y cazan ¡Es muy
molesto! Pero también crían gallinas, es lo único que
les interesa. ¿Tú buscas gallinas?
Le contesté que no y por tercera vez pregunté: ¿Qué
significa domesticar?
El sólo respondío que ya era una cosa olvidada:
Significa “crear vínculos”
¿Crear vínculos? Pregunté interesado.
-Efectivamente, verás: Tú no eres para mí todavía más
que un muchachito igual a otros cien mil muchachitos
y no te necesito para nada, tampoco tú tienes
necesidad de mí y no soy para ti más que otro zorro
entre otros cien mil zorros semejantes; pero si tu me
domesticas tendremos necesidad el uno del otro . Tú
serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único
en el mundo.
Estaba empezando a comprender, -Hay una flor, creo
que ella... Le dije.
-Es posible, aquí en la Tierra se ve todo tipo de cosas
Le aclaré que la flor no se encontraba en el planeta
Tierra y el comenzó a hacer preguntas muy intrigado:
¿Está en otro planeta?
Contesté que sí siguió con el cuestionario: ¿Hay
cazadores? ¿Hay gallinas? A lo que respondí que no se
mostró un poco decepcionado y dijo que nada era
perfecto acompañado de un susurro.
Empezó a contarme un poco de él:
Su vida era monótona, cazaba gallinas y los hombres
lo cazaban a él, como todas las gallinas se parecían y
los hombres eran iguales, se aburría un poco. Después
me señaló un campo de trigo y me explicó que ya que
el no comía pan ese campo no significaba nada para
él y eso lo ponía triste, me pidió que lo domesticara
para tener otra perspectiva de la vida.
Hubo un momento de silencio después de eso y me
observó.
¿Qué tengo que hacer? Le dije por fin.
El zorro me dijo que me sentara cerca de el y lo
mirará con el rabillo del ojo y por cada día que pasara
me acercaría más a su lado, me explicó en que
consistía el rito que tenía que seguir y al fin lo
domestiqué, llegando casi el día de mi partida me dijo
que ya tenía una razón para querer el trigo. Me pidió
que fuera a ver a las rosas para darme cuenta del
porqué mi rosa si era única para después regresar a
decirle adiós y a cambio el me compartiría un secreto.
Entonces obedecí y al estar frente a ellas observé que
ellas estaban vacías ya que no pertenecían a nada di
nadie, como el zorro antes de ser dometicado, el
amaba a su rosa y era su amigo, esomla hacía
diferente a todas las demás, cuando descubrí esto
estallé en regicijo y volví a decirle adiós al zorro, como
lo prometió me dijo su secreto:
Sólo con el corazón se puede ver bien, lo
esencial es invisible para los ojos.
Y me recordó que lo que hacía especial a mi rosa era
el tiempo que había invertido en ella y que era mía,
con esto emprendí de nuevo el viaje.

Diferencias entre mi relato escrito y oral.

En el relato escrito leí varias veces el cuento y
condense las ideas principales, hice que mi mente
hiciera un sin fin de ejemplos para las oración
principal de mi relato, en que persona quedaría mejor
escrito y de que forma iba a plasmar mis ideas,
conforme iba escribiendo iban brotando ideas, en el
relato oral fue más fácil, ya que tenía lo escrito, se me
dificultó un poco la modulación de voz, me gustó más
la manera escrita por la creatividad que empleé.
LINK DE MI AUDIO
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