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¿CÓMO ES EL UNIVERSO: FINITO O

INFINITO?
julio 5, 2017
Hoy toca responder a unas cuantas preguntas que quedaron en el aire cuando hablé sobre
el concepto de universo observable que, en resumidas cuentas, es el volumen de
46.500 millones de años luz de radio que nos rodea. Esa esfera representa la distancia
a la que se encuentran hoy en día los objetos más lejanos de los que tenemos información,
que son los que emitieron la radiación de fondo de microondas hace 13.800 millones de
años.

Pero, ¿qué relación tiene el límite del universo observable, también llamado horizonte de
partículas, con el tamaño realdel universo? ¿Hay más espacio y galaxias tras ese horizonte
o la realidad termina en él como si fuera una carretera cortada? Y, si el universo continúa
más allá de este límite, ¿el espacio y las galaxias se extienden hasta el infinito o dejarías de
ver materia si te alejaras lo suficiente?
Creo que son demasiadas preguntas incluso para mí.
No te preocupes, voz cursiva. Empecemos por lo básico: ¿cómo sabemos que el universo
continúa más allá del universo observable?
Ya habíamos visto que el universo no está en expansión porque las galaxias se estén
alejando de un punto «central» del espacio sino que, en realidad, lo hace porque el propio
espacio que las separa se está estirando. Como todas las galaxias se alejan unas de otras
ellas sin ningún punto de referencia común, siempre te dará la impresión de que tú estás
en el centro del universo y que el resto de las galaxias son las que se están alejando
de ti, vayas donde vayas.
Por supuesto, eso no es más que una ilusión óptica que se puede apreciar claramente en
esta secuencia de imágenes: cada vez que se superpone el mismo punto de las dos
imágenes de cada fotograma (los puntos están más separados en una de ellas), el resto
quedan descentrados, dando la impresión de que todos los demás se han alejado de él.
En la vida real, este fenómeno provoca que cada punto del espacio tenga su propio universo
observable a su alrededor, lo que significa que, si te mudaras a una galaxia lo
suficientemente lejana, observarías regiones distantes del universo que quedan fuera
de nuestra vista desde la Vía Láctea.

Y a cada observador que está en el centro de cada universo observable le parece que todo
lo que le rodea se está alejando de él.
Total que, como parece que el universo no tiene un centro absoluto y a lo que
llamamos universo observable es una simple cuestión de perspectiva, entonces parece
lógico concluir que el universo continúa más allá de nuestro universo observable.
Captado. Así que, en principio, existirían más espacio y más galaxias tras el horizonte de
partículas ¿verdad?
Exactamente, voz cursiva.
Vale, vale. Pero, entonces, ¿qué pasa con todo ese universo que hay más allá de nuestro
universo observable? ¿Es una esfera aún mayor, pero con un tamaño limitado? ¿O, por el
contrario, las galaxias se extienden para siempre en todas las direcciones?
Esa es una pregunta más difícil de responder.

Para poder estimar hasta qué distancia se extiende universo más allá del horizonte de
partículas, primero tendríamos que recibir algún tipo de información de esa región que nos
permitiera deducir cómo está estructurada. El problema es que todo lo que se encuentra
más allá de nuestro universo observable se aleja de nosotros a velocidades muy
superiores a la de la luz, de modo que nunca podremos recibir ninguna señal emitida
desde su interior.
De hecho, incluso hay objetos que están dentro de nuestro universo observable que se
alejan de nosotros tan deprisa que nunca sabremos nada más de ellos. Esto se debe a que
se encuentran tras otro límite cosmológico, el horizonte de sucesos del universo, que
representa la distancia a partir de la que un rayo de luz emitido ahora mismo nunca podrá
alcanzarnos en el futuro, por mucho que se expanda nuestro volumen de Hubble.
Actualmente, esta frontera se encuentra a unos 16.300 millones de años luz así que, como
podéis ver en la siguiente imagen, eso limita mucho la cantidad de información del resto del
universo observable que podremos recibir en un futuro.

Pero, un momento, ¿cómo que no tenemos información de la materia que hay más allá del
universo observable? ¿Y qué pasa con el famoso flujo oscuro?
Buena observación, voz cursiva, aunque no sé de dónde sacas eso de famoso.
El flujo oscuro es una supuesta anomalía en la distribución de la velocidad de algunas
galaxias lejanas que parece indicar que se están moviendo hacia la misma región del
espacio (aún más alejada que el famoso (ahora sí) Gran Atractor). En base a estos datos,
se ha sugerido que, en el pasado, estas galaxias podrían haber sido atraídas por la gravedad
producida por una gran concentración de masa situada más allá de nuestro universo
observable… Pero aún se está debatiendo la existencia de esa anomalía así que, de
momento, no hay nada claro.
En cualquier caso, aunque no tenemos evidencias directas de que haya algo más allá del
horizonte de partículas, el consenso es que el universo observable forma parte de un
universo aún mayor. Partiendo de ahí, existen dos opciones: que la extensión del universo
sea limitada más allá de nuestro horizonte de partículas o que se extienda
infinitamente en todas las direcciones.
Veamos qué consecuencias tendría cada una de ellas.

HIPÓTESIS 1: EL UNIVERSO ES FINITO.


Venga, voy a ayudarte a encaminar esta sección. ¿Cómo se supone que funciona un
universo finito? ¿Es como una esfera enorme llena de galaxias que se acaba de repente?
¿O hay algún tipo de barrera al final, como un barranco en el límite del espacio?
Gracias, voz cursiva, pero no hay nada de eso. Un universo finito no tiene por qué estar
limitado necesariamente por una frontera.
Hace un tiempo estuve hablando sobre qué significa que el universo sea «plano». Los
astrónomos no están afirmando que el espacio tiene literalmente dos dimensiones cuando
dicen que el universo es «plano», sino que es un término con el que se refieren a si nuestro
espacio tridimensional está curvado o no sobre una dimensión adicional.

La curvatura del espacio influye en la pregunta de hoy porque, si se descubriera que el


universo tiene una curvatura positiva (como una esfera), entonces no sólo significaría
que el espacio está cerrado sobre sí mismo y que, por tanto, el universo tiene un
volumen finito sino que, además, implicaría que tampoco está delimitado por una
frontera.
¿Pero cómo puede estar el espacio tridimensional cerrado sobre sí mismo? ¿Y cómo no va
a tener una frontera? ¿Cómo se supone que tengo que tragarme eso?
Intentaré ponerlo de otra manera que suene menos extraña.

Imaginemos que nos encontráramos sobre una superficie plana y finita que flota en medio
del espacio (que no es el caso). Si nos pusiéramos a caminar en línea recta en cualquier
dirección encima de ese mundo plano, entonces terminaríamos llegando hasta el borde y
nos veríamos obligados a detenernos. Sobre una superficie curvada como la de una esfera,
en cambio, ocurre algo muy distinto: si caminamos en línea recta en cualquier dirección,
siempre volveremos al mismo punto de origen incluso aunque, desde nuestro punto de vista,
no hayamos hecho más que alejarnos de él durante todo el camino.

¿Y qué tiene que ver esto con el universo real? Pues que si el espacio tuviera curvatura
positiva y, por tanto, estuviera cerrado sobre otra dimensión adicional, entonces
podrías montarte en una nave, partir en cualquier dirección en línea recta y, con el
tiempo suficiente, volverías a llegar a la Tierra aunque nunca hubieras dado media
vuelta.
Ah, vale, como en esos videojuegos viejos en los que desaparecías por un lado de la pantalla
y aparecías por el otro.
Sí, bueno, más o menos. En cualquier caso, la ventaja de vivir en un espacio cerrado es
que puedes calcular el tamaño del universo si consigues medir su curvatura. Y eso es
precisamente lo que se está intentando.
En primer lugar, me gustaría adelantar que no tiene pinta de que el espacio tenga
curvatura alguna: las mediciones más precisas que se han hecho hasta ahora parecen
sugerir que vivimos en un universo «plano». Pero, aunque hablaré sobre eso en un
momento, en principio también existiría la posibilidad de que vivamos en un universo
cerrado (y, por tanto, finito), pero tan grande que somos incapaces de distinguir su
curvatura con la tecnología actual.
Partiendo de esta premisa, hay gente que se ha dedicado a intentar estimar cómo sería esa
curva imperceptible e intentar calcular el tamaño del universo. Por ejemplo, en 2011, un
grupo de investigadores aplicó análisis estadístico sobre el mapa de la radiación de fondo
de microondas y concluyeron que, para observar una curvatura tan pequeña, tendríamos
que estar metidos en un universo con un volumen 250 veces mayor que el de
nuestro universo observable.
Por otro lado, otro artículo de 2006 sostenía que el volumen del universo podría ser al menos
21 veces mayor que el del universo observable. Pero el artículo añadía que, en el caso de
que el universo fuera finito, las perturbaciones que sufre la radiación de fondo de
microondas de camino a nuestros telescopios harán que nunca podamos saber si su
volumen es más de 10.000 veces mayor que el del universo observable, por mucho que
mejore la precisión de nuestros instrumentos.
Pero, pese a que existe la posibilidad de que vivamos en un universo «cerrado» y
finito, aunque tan grande que nunca podremos deducir su tamaño, de momento hay
otro escenario que parece más probable…
HIPÓTESIS 2: EL UNIVERSO ES INFINITO.
Ya en el siglo XVI, se razonó que el universo tenía que ser finito porque, si fuera infinito y
contuviera una cantidad ilimitada de materia, en todos y cada uno de los puntos del
cielo habría una estrella. Si esto fuera cierto, entonces el cielo debería estar
permanentemente iluminado por la luz combinada de infinitas estrellas… Y, como habréis
notado, ese no es el caso.
Pero esta contradicción no demuestra que el universo tenga que ser necesariamente
finito: hoy sabemos que la expansión del universo se acelera con la distancia así que,
incluso aunque existiera un número infinito de estrellas ahí fuera, sólo podemos ver la
cantidad finita que está dentro de nuestro volumen de Hubble. Y eso por no decir que la luz
emitida por objetos suficientemente lejanos está tan estirada por la expansión del espacio
que queda fuera del rango de la luz visible.
En realidad, el hecho de que no se haya podido medir una curvatura apreciable
del espacio apoya la idea de que el universo podría ser infinito.
¿Pero qué quiere decir exactamente que el universo podría ser infinito? ¿Que sería
infinitamente grande y contendría infinitas galaxias? ¿Que contiene una cantidad limitada de
materia, pero el espacio es infinito? ¡ESPECIFICA!
Me refiero a que podría ser infinito en los dos sentidos: tanto en su extensión como en la
cantidad de materia que contiene.

Hemos visto que, en un espacio tridimensional cerrado, siempre volverías al punto de origen
si te movieras en línea recta. Pero, si hicieras lo mismo en un espacio plano (e
infinito), simplemente te alejarías de tu planeta de origen eternamente y nunca más
volverías a ver a tus seres queridos… Aunque es posible que encontraras cosas bastante
raras por el camino.
Como explica Fraiser Cain en Phys.org la probabilidad de que cualquier cosa se repita
en alguna región del espacio en un universo infinito debería ser del 100%. Por tanto,
podrías encontrar cualquier cosa imaginable si te alejaras lo suficiente de tu planeta natal,
siempre y cuando las leyes de la física permitieran su existencia. De hecho, en un universo
infinito, nada impediría que exista un planeta idéntico a la Tierra habitado por una copia
exacta de ti mismo en algún lugar del espacio… O incluso que existieran infinitas versiones
de ti mismo perdidas en la distancia eterna.
Pero, antes de que convirtamos la ficción en ciencia, no está de más mencionar que todo
esto es especulación: hay quién se opone a esta idea y sostiene que un universo
infinito no implica necesariamente que cualquier evento se tenga que repetir más de
una vez en su interior.
Bueno, vale, pero estoy empezando a aburrirme de tantas elucubraciones sin fundamento.
Ve al grano: ¿El universo es finito o infinito?
Pues siento decepcionarte, voz cursiva, pero nadie lo sabe de momento. En base a los
datos de los que disponemos a día de hoy, podemos encontrarnos en dos escenarios:
 Si el espacio no tiene curvatura (que, de momento, parece ser el caso), el universo podría
ser infinito tanto en su extensión como en la cantidad de materia que contiene.
 Si el espacio tiene una curvatura positiva tan leve que no la podemos detectar, entonces
viviríamos en un universo inmenso, pero finito, cerrado sobre sí mismo.
Para variar, las cosas no son tan simples porque, mientras que un espacio con curvatura
positiva da lugar necesariamente a un universo finito, parece ser que hay topologías que
permiten que un espacio plano también genere un universo finito.
En cualquier caso, si desconocer la verdadera extensión del universo os impide dormir,
tened en cuenta este dato: tanto si el universo es finito como si es infinito,
permaneceremos siempre atrapados en el interior de nuestro universo observable.
Es más: teniendo en cuenta que el horizonte de sucesos del universo está mucho más cerca
que el límite del universo observable, incluso aunque ahora mismo nos montáramos en una
nave del futuro y pusiéramos rumbo a los confines del espacio, tan sólo tendríamos
acceso al 3% del universo observable. Y ese número no hace más que bajar a medida
que la expansión del universo se acelera.
O sea, que nunca podremos comprobar personalmente si alejarte en línea recta de la Tierra
te lleva de vuelta a casa o si, por el contrario, te distancia para siempre de tus seres queridos,
porque nunca llegaremos a atravesar el límite del universo observable para ver qué hay más
allá… A menos que alguna de esas tecnologías teóricas tan recurrentes en la ciencia-ficción
se convierta en una realidad (como los agujeros de gusano).

Así que no te preocupes de momento, voz cursiva, porque, independientemente de que el


espacio sea finito o infinito, estaremos para siempre atrapados en un pequeño
volumen del universo observable.
Bieeeeen…
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