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INFORME:

Algunos aspectos
relativos al proceso
eruptivo del
Complejo Volcánico
Puyehue Cordón
Caulle iniciado el
día 04 de junio de
2011, los riesgos
naturales
regionales y Villa La
Angostura.­

Emilio R. Molla
Cristian M. Sandoval
Patricia Contreras
David Tressens
Sec. De Def. Civil, MVLA
09 de diciembre de 2011
(con actualización mes de enero de 2012 en esta
edición) 1
Villa La Angostura. Evento Volcánico
Ubicación

Villa La Angostura se ubica dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi. Este se localiza
al sudoeste de la provincia del Neuquén y noroeste de la provincia de Río Negro.
Limitando al norte con el Parque Nacional Lanín , al oeste con el Parque Nacional
Puyehue, en la República de Chile, al Sur con el Río Manso Inferior y hacia el Este
sigue principalmente los ríos Villegas, Ñirihuau y Limay. Dentro del área se
encuentran San Carlos de Bariloche (aprox. 22.000 ha.), Villa La Angostura (aprox.
8.000 ha), Villa Mascardi, Villa Traful (aprox. 600 ha) y el Parque Nacional Los
Arrayanes (aprox.1.793 ha) entre los 40º 8ʹ y 41º 35ʹ de latitud sur y los 71º 2ʹ y 71º 57ʹ de
longitud oeste. Otras ciudades turísticas próximas son El Bolsón, San Martín de los
Andes y el eje Osorno­ Puerto Montt en Chile (www.sendasybosques.com.ar).
El parque tiene una superficie de 709.474 ha (427.512 ha. en la provincia de Neuquén y
281.962 ha. En la provincia de Río Negro). Del total, 473.352 son de parque nacional,
160.686 a la reserva nacional y 75.436 a la reserva natural estricta.
El acusado rango altitudinal, entre los 3554 y 700 msnm., da lugar a tres principales
unidades de paisaje: altos andes, bosques patagónicos, estepas patagónicas. Anidados
dentro de estas matrices principales se encuentran subunidades fisonómicas y parches
de distribución insular.

Relieve

Las principales fuerzas modeladoras del paisaje se deben a la orogenia andina del
Terciario, formadora del relieve sobre el cual han actuado fenómenos posteriores. El
más importante de éstos es sin duda la acción de los glaciares durante tres millones de
años y con particular intensidad en los últimos cuatro episodios del cuaternario,
cuando la totalidad del parque estuvo cubierta por un manto de hielo de hasta 2000
metros de espesor, hasta su repliegue final que comenzó hace 12.000 años y continúa
en la actualidad. Vestigios de esos glaciares pueden hallarse todavía en los cerros
Tronador, Bonete y Falkner, entre otros.
El Parque presenta sus mayores elevaciones en el oeste, disminuyendo hacia el Este, en
la meseta patagónica. El Cerro Tronador (3554 msnm.) es el más alto del parque. Se
destacan también, los cerros Crespo, Cuyín Manzano, Campana, Millaqueo, Capilla,
Santa Elena, Bastión, López y Catedral, con alturas que oscilan entre los 1800 y 2400
msnm. Los cerros menores de 2000 metros son en general redondeados y los de mayor
altura tienen picos y agujas que quedaron a salvo de la erosión del hielo. Profundos
valles y quebradas, llamados "pasos", permiten el cruce hacia Chile. Los más conocidos
son Puyehue, Perez Rosales y el de los Vuriloches, que fue muy utilizado por los
nativos y los primeros exploradores. Hacia el Este, en zona preandina, se distinguen
los cerros Otto, Ventana y el Cordón del Ñirihuau.

Geología

Esta provincia geológica (Cordillera Norpatagónica) se extiende desde los 39° hasta los
43° de latitud sur. El basamento está compuesto de rocas metamórficas y magmáticas

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Valle del Ujenco

Sistema Volcán monte Tronador visto desde la cumbre del C° Inacayal

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de distintas edades. Sobre éste se depositó una cubierta volcánica sedimentaria de
edades mesozoicas y terciarias. A su vez, sobre las dos entidades mencionadas se
depositaron, durante fines del Terciario y el Cuaternario, volcanitas, sedimentitas,
sedimentos glacigénicos y cenizas volcánicas (Chebez 2005). A partir de estos
materiales, la forma del paisaje del Nahuel Huapi es el resultado de: a) los
plegamientos andinos, b) la actividad volcánica consecuencia de dicha orogenia, y c) el
intenso modelado moderno de los valles en U de las cuencas lacustres, por parte de la
acción glaciaria (Mermoz et al. 2000).
La cordillera andino­patagónica terminó de formarse en el Mioceno, hace 15 millones
de años. Un vulcanismo posterior formó el domo de basaltos terciarios de mayor altura
de la región, el Tronador. Este relieve moderno es el causante del gradiente de
precipitaciones, produciendo una sombra de lluvia hacia el Este, dando lugar al semi­
desierto patagónico. Desde el final del Terciario y durante todo el Cuaternario hubo
intensas fluctuaciones climáticas, originando períodos glaciarios e interglaciarios que
modelaron todas las cuencas hidrográficas del área, incluyendo las cubas y morenas
que contienen los lagos, los valles en “U”, las formas redondeadas de las cumbres
bajas, las aristas y agujas de las formas altas y los casquetes de hielo que todavía
permanecen en el parque nacional. Estas masas de hielo, junto a las grandes
extensiones de nieve permanente por encima de los 1400 msnm, mitigan las
fluctuaciones de los caudales de los ríos principales, ya que en verano coincide la época
de menores precipitaciones con el período de mayor derretimiento (Armesto et al.
1995a, Mermoz et al. 2000). El aporte de cenizas volcánicas de edad postglaciaria es
muy activo en la región, incluso en la actualidad. Estos depósitos han contribuido a la
formación de los andisoles y otros suelos modernos del paisaje actual (Mermoz et al.,
2000).

Geomorfología

En la zona altoandina, a más de 1600 metros de altitud, hay un “archipiélago” formado


por los filos de montañas que emergían por encima del hielo durante las máximas
glaciarias. Aquí están todas las cabeceras de cuencas del parque nacional, que a
menudo comienzan con una pequeña laguna de altura. Las condiciones ecológicas para
el establecimiento de la vida son muy rigurosas, debido al escaso período sin nieve, a
las pronunciadas pendientes y consecuentemente el escaso desarrollo de los suelos, a
los fuertes vientos, a la insolación implacable, a la inestabilidad del sustrato, y a la
acusada amplitud térmica estacional y diaria. Hacia el este, como los mantos de hielo
no alcanzaban tanto espesor, ya lejos de sus circos de origen, los islotes altoandinos
alcanzan paulatinamente mayor superficie, fusionándose más allá del alcance de las
masas glaciarias, en figuras de contornos irregulares que funcionan como divisorias de
aguas (Mermoz et al. 2000, Chebez 2005). La zona de bosques húmedos, que ocupa el
60% de la superficie del parque, estuvo completamente cubierta por hielo hasta hace
unos 10.000 años, formándose suelos a partir de terrazas aluviales, deltas y conos de
deyección en valles de fondo profundo y redondeado, orientados generalmente
noroeste­sudeste, en donde se asientan los lagos actuales. La forma de las costas del
Lago Nahuel Huapi es un claro ejemplo de la disminución de la potencia erosiva de los
glaciares a medida que avanzamos hacia el este y nos alejamos de las montañas: muy
heterogénea, con fiordos, penínsulas y unas 20 islas en la mitad oeste, y homogénea y

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Algunos tipos de rocas ígneas (origen volcánico)

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Clasificación de rocas ígneas
Aunque el magma es una sustancia muy compleja, las rocas ígneas se componen
solo de algunos minerales escenciales. Estos minerales son todos silicatos.
También existen, además, otros minerales meramente accesorios. Las rocas ígneas
se clasifican en cuatro grandes grupos a partir de su contenido de sílice. Éstas son
las rocas ígneas ácidas (más del 66% de su composición) , intermedias (del 52 al
66%), rocas básicas (del 45 al 52%) y rocas ultrabásicas (menos del 45%).
A su vez, existen otras dos grandes categorías, intrusivas y extrusivas. Las
intrusivas son el granito, las pegmatitas, sienita, diorita, gabro, serpentinita y la
diabasa. Las extrusivas, son aquellas formadas por coladas de lava y piroclastos y
expulsadas por los volcanes.
De las lavas podemos distinguir la viscosa, también llamada pahoehoe (palabra
hawaiana que significa áspero, espinoso); la lava tosca en bloques, también
llamada aa (palabra hawaiana para designar el satinado); y finalmente la lava
almohadillada que se forma cuando la lava fluye en agua. Las lavas más fluídas,
que pueden descender a velocidades considerables y a grandes distancias,
solidifican en rocas ígneas básicas, como el basalto. El basalto espor mucho, la
roca ígneas etrusiva más común, formada a partir de lava. Por otra parte, los
magmas ácidos son más viscosos y lentos, y forman rocas como la riolita. La
traquita y la andesita son rocas ígneas intermedias, formadas a partir de lava.
Las principales rocas ígneas extrusivas son el basalto, la riolita, traquita, andesita,
obsidiana, pumita, bombas volcánicas, ignimbrita y tobas.
El basalto es una roca ígnea básica, vítrea o microcristalina, solidificada a partir
de lava, aunque algunos pueden formarse cerca de la superficie en diques o silis.
El basalto a construido mochos volcanes e islas oceánicas, como Hawai. También
cubre grandes áreas continentales, como la meseta del Deccán, en la India, donde
se apilan unos 700.000 km3 de basalto. A veces el basalto al enfriarse se fractura
en bloques hexagonales, como la Calzada del Gigante, en Irlanda, formación con
alguna similitud al sector de Cascada Santa Ana. Es una roca gris oscura que,
cuando se expone al aire, se recubre de una costra rojiza o verdosa. Con frecuencia
es vesicular o amigdaloide, y en ambos casos se hallan rellenas de minerales como
calcita, calcedonia y zeolitas.

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En orden de arriba hacia abajo, brecha volcánica, basalto de flujo, basalto, andesita,
riolita y gabro.

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Algunas rocas características encontradas dentro del área urbana del Ejido,
encontradas en cauces de arroyos o excavaciones. Las mismas se encuentran en
depósitos por debajo de las capas de depósito de tefra precedentes o depositadas en
superficie de y por los cauces.­

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La andesita, cuyo nombre proviene de la Cordillera de los Andes, es una roca
ígnea intermedia, de grano fino a vítrea, que se encuentra en los volcanes (más
adelante veremos como esta es principal constituyente de los volcanes de la
región, al igual que el basalto) de las masas continentales, sobre todo en los
lugares donde se están formando cordilleras. Es la segunda roca ígnea en
abundancia. Químicamente, la andesita es semejante a la diorita. Sus colores
varían del verde, gris, púrpura y marrón al negro. Puede ser también vesicular o
amigdaloide.

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Formaciones C° Dormilón (cumbre)

Formación C° Montes de Oca

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redondeada en la mitad este. En el ecotono bosque­estepa, de unos 20 Km. de ancho,
las fuerzas modeladoras del paisaje son más fluviales que glaciarias, lo que se denota
por el cambio de perfil de los valles de “U” a “V”. Como en todo paisaje aguas debajo
de grandes pasados glaciarios, los valles tienen hoy en día una dimensión exagerada en
comparación a los caudales que por ellos hoy escurre, como puede verse claramente en
el valle del río Limay, en el mirador denominado Anfiteatro. En la estepa coexisten
procesos deposicionales, denudacionales, laderas rocosas, afloramientos, pendientes de
escombros de talud, conos de derrubios y valles fluviales. En este ambiente pueden
reconocerse sutilmente dos geoformas, la estepa llana y la estepa colinada. La primera
ocupa planicies de los sectores más bajos del parque nacional y se ha formado con
material deposicional de origen glacifluvial. La segunda tiene más pendientes,
afloramientos rocosos y material coluvial (Mermoz et al., 2000). Estas condiciones de
mosaico de base geomorfológica prodiga una heterogeneidad de condiciones
ambientales que explica la riqueza biológica que existe en el este del Parque Nacional
Nahuel Huapi.

La combinación de la topografía y el gradiente de precipitaciones prodiga diferentes


retos ambientales para el establecimiento de la flora y de la fauna. La distribución y
riqueza de especies están controladas por la combinación de temperatura y humedad
en un gradiente de cambio muy fuertemente orientado en dirección oeste­este
(Armesto et al. 1995a y b).Según Monjeau et al. (1997, 1998) la Patagonia se divide en
cuatro grandes unidades paisajísticas: andina, ecotonal, esteparia occidental, esteparia
oriental. La unidad andina puede dividirse como lo hacen Mermoz et al. (2000) en alto­
andina y bosques húmedos, la ecotonal coincide con el concepto de bosques de
transición de Mermoz et al.; y la esteparia occidental de Monjeau et al. puede dividirse
en estepas colinadas y estepas planas, según la clasificación de Mermoz et al. El
gradiente ambiental del Parque Nacional Nahuel Huapi no alcanza a incluir
componentes de las estepas orientales.
En la zona altoandina es donde las condiciones son más rigurosas. La principal
variación está dada por la orientación de las montañas (laderas de solana o de umbría,
de sotavento y de barlovento) y por su altura relativa. Esquematizando a partir de un
modelo cónico: las laderas expuestas al noreste son cálidas y secas, las expuestas al
noroeste son cálidas y húmedas, las expuestas al sudeste son frías y secas y las
expuestas al sudoeste son frías y húmedas. A mayor altura disminuye la temperatura
en cualquiera de las cuatro situaciones a razón de un grado centígrado cada 150­180
metros, aproximadamente(4). A pesar del nivel de precipitaciones, la vegetación es de
tipo semidesértica, adaptada a condiciones de rigurosidad climática, sobre todo a
largos períodos de bajas temperaturas y escasez de agua. Esto se debe a la pobre
retención de agua del suelo debido a su naturaleza rocosa, por lo que ocurre un déficit
de humedad entre enero y marzo, dentro del corto período de crecimiento de la
vegetación. Los fuertes vientos y la mayor radiación incidente debido a la elevada
altitud son factores que agravan el déficit de humedad (Mermoz et al. 2000). En
invierno, las temperaturas bajo cero limitan la oferta de agua asimilable. Sólo en
humedales y cauces de arroyos la vegetación es un poco más densa, con pastizales y
arbustales.

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Siguiendo la descripción como quien baja desde las cumbres hacia el este, por debajo
de los 1600 metros aparecen los primeros bosques, dando lugar a la unidad ambiental
que Mermoz et al. (2000) denominan Bosques Húmedos. Dentro de esta unidad
Vol cán Pant oj o
F

Volcán Pantojo

Formación Cascada de Santa Ana

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Formación Cascada Santa Ana

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Formación Cascada Santa Ana

Cajón Negro (valle en forma de U, lecho glaciario)

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Garganta de la cascada de A° Las Piedritas (Inacayal)( post erupción 4 de junio de
2011)

Cabecera A° El Colorado y Florencia Norte

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N

Deltas del sistema


hídrico de A° Las
Piedritas con
suma de cauces de
El Colorado y
Florencia

En rojo aparece la línea


de la costa relevada en
una mensura
complementaria de
1901 realizada por el
Ing. Martines para la
mensura de división de
la Colonia Pastoril
Nahuel Huapi de 1902.
En amarillo se
encuentran los tres
deltas reconocibles
(reconocidos) de
desembocadura de
estos sistemas hídricos.
En punteado el más
antiguo de periodo
inmediatamente post
glaciario, en puntos y
líneas el segundo
período; y por último,
en líneas intermitentes
el delta actual.­

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existen grandes variaciones debidas a que el 90% del gradiente de precipitaciones
ocurre en el espacio en el que estos bosques prosperan. A este eje predominante, que
ordena los bosques de oeste a este, se le suma el gradiente altitudinal, que aporta a la
variación la fuerte causalidad de la temperatura. A escala más localizada, las
variaciones del relieve montañoso, tal como se describió para la unidad alto­andina,
son la causa de la variación ecológica. Los suelos son poco profundos, con escasa
proporción de arcilla y la presencia de una capa de materia orgánica proveniente de la
descomposición de hojas y ramas (Dimitri 1974), que ejerce una importante función
antierosiva en estos suelos tan susceptibles a la pérdida de materiales por erosión
hídrica.

Al este de la ciudad de San Carlos de Bariloche, los bosques se fragmentan dando lugar
a una matriz de estepa cada vez más extensa y continua. Es un ancho ecotono con
asociaciones de especies que sólo se dan ahí, y que corresponde con la unidad del
Bosque de Transición descripta por Mermoz et al. (2000).
Finalmente, hacia el este, la vegetación arbórea es excepcional, dependiente de
oportunos humedales y bordes de arroyo, y el paisaje predominante es el de estepa,
colinada o plana, que se extiende por 700 kilómetros hacia el Atlántico, caracterizando
al paisaje generalmente relacionado con el concepto de Patagonia por los viajeros,
desde las descripciones de Charles Darwin.

Entorno volcánico

La región responde a una naturaleza volcánica encontrándose inmersa entre cordones


montañosos conformados por basaltos y granitos de origen ígneo. La construcción del
arco volcánico andino está directamente relacionada a la subducción de la Placa de
Nazca debajo de la Placa Sudamericana con una velocidad de convergencia de 7,9
cm/año. A esta latitud el arco volcánico exhibe un ancho de 60­70 kilómetros y la
corteza continental un espesor de 38­40 kilómetros.
En la Cordillera de los Andes, al sur de los 39°S se emplaza un conjunto de centros
volcánicos erosionados que incluyen remanentes de los conductos emisores o facies
volcánicas proximales, intermedias o distales. Nuevos datos geocronológicos K­Ar
muestran que sus edades se encuentran principalmente en el intervalo Plioceno
Superior­Pleistoceno Medio y son equivalentes a los dispuestos en la vertiente
argentina. Las características geoquímicas de estos centros volcánicos son semejantes a
las exhibidas por los centros cuaternarios de este segmento y muestran también una
variación gradual hacia el este de las razones La/Sm, Ba/La y K hasta alcanzar las
características de trasarco exhibidas por los centros volcánicos más distantes del
margen. Trabajos anteriores, bajo el supuesto que en la vertiente occidental de la
cordillera los aparatos volcánicos sólo incluían unidades cuaternarias, sugirieron la
migración al oeste del arco volcánico hacia el final del Plioceno. Por el contrario,
nuestros antecedentes geocronológicos y geoquímicos muestran que, de un arco
extremadamente ancho en el Plioceno Superior­Pleistoceno Medio, se ha variado a uno
más reducido y esencialmente concentrado en la cordillera principal, conservando el
mismo frente. Una variación significativa de la velocidad de convergencia se registra a

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fines del Plioceno y se postula que ella actuaría más tarde como factor de primer orden
en la configuración espacial del arco volcánico al sur de los 39°S.
La geología de la cordillera andina, entre los 39° y 42°S, ha sido recientemente
actualizada en programas de cartografía geológica regional principalmente realizados
en la República de Chile. Nuevos antecedentes estratigráficos, geoquímicos y
geocronólogicos permiten ahora caracterizar las unidades volcánicas antiguas,
espacialmente asociadas a los volcanes cuaternarios, pero de edad y significado hasta
ahora desconocidos. En este trabajo se persigue dos objetivos fundamentales. El
primero es informar antecedentes geocronológicos y geoquímicos de las unidades
volcánicas del Plioceno Superior­Pleistoceno de la cordillera de los Andes, entre los 39°
y 42°S. El segundo, situar estas características en el contexto de estudios conducentes a
comprender las relaciones causales entre el volcanismo y la tectónica del Cenozoico
superior en los Andes del Sur. Las unidades que adelante describimos corresponden a
edificios volcánicos parcial o complementamente desmantelados, situados junto o en la
base de los centros volcánicos cuaternarios que forman el frente volcánico activo.
Unidades volcánicas de similar edad se emplazan también en la vertiente oriental de la
cordillera andina y se intentará, mediante su comparación, entender la arquitectura del
arco volcánico del Plioceno Superior­Pleistoceno. El arco volcánico moderno hereda las
condiciones establecidas en los ciclos precedentes y su comprensión, por lo tanto,
resulta útil en el análisis tectónico de los eventos cuaternarios. Los factores que
controlan la variación espacial del arco volcánico se analizan dentro del contexto
geodinámico.
En los Andes del Sur, estructuras volcánicas centrales y secuencias
volcanosedimentarias, fuertemente erosionadas, constituyen tanto el basamento de los
volcanes cuaternarios como centros eruptivos independientes. Se les reconoce en la
cordillera andina desde su borde occidental, junto a estratovolcanes del frente activo,
hasta la vertiente argentina, sobre bloques alzados de basamento paleozoico,
granitoides o secuencias volcano­sedimentarias del Meso­Cenozoico (e.g., L. Lara y H.
Moreno1, 1998; Franzese, 1995).
El grado de denudación es variable permitiendo tanto el reconocimiento de estructuras
centrales conservadas, complejos volcánicos con facies proximales y vestigios de los
centros emisores, hasta secuencias desconectadas de sus alimentadores.
En proximidades a esta región confluyen las placas tectónicas Sudamericana, de Nazca y
Antártica.

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Entre la zona de subducción, en la que se encuentran las placas de Nazca y Sudamericana, y la
longitud de Villa La Angostura (Cordillera de los Andes) se ubica inmediatamente al oeste y
paralelo a la cordillera la Falla de Liquiñe­Ofqui.

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Esquema de funcionamiento del sector entre la costa chilena (encuentro de placas) y la
cordillera.­

Esquema de sistemas volcánicos formados a lo largo del arco.­

� La Zona de Fallas Liquiñe­Ofqui (LOFZ) se extiende por uno s 1000 Km desde la zona de Liquiñe
en la provincia de Valdivia hasta el Golfo de Penas por el sur .
� Originalmente recibio el nombre de Falla Liquiñe­Reloncaví

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� Su parte norte co nsiste en una rama princi pal rumbo N10ºE que según (Hervé , 1976) tiene u n
desplazamiento transcurrente dextral, y con un manteo fuer te de 80º a 85º.
� En la provincias de Chiloé y particularmente en Aysen co nsiste en un sistema de fallas en cola
de caballo.

� El momento de formacion de la falla no es sabido con exactitud, pero dado que tiene
gran relacion con emplazamiento de intrusivos se le puede asignar movimientos
durante el mesozoico

� Su actividad mejor registrada es durante el oligoceno –plioceno, donde

� Se observan rasgos de deformación tanto dúctil como frágil.

� Posee en arreglo espacial que calza muy bien con un modelo idealizado de un sistema
de fallas de rumbo, incluyendo un duplex (Woodcock and Fisher, 1986)

� Presenta rotación de bloques local

� Plioceno � deformacion de rumbo fragil

� Holoceno� altas tazas de alzamiento.

� Se ha sugerido que una considerable porcion del strain inducido por subduccion ha
sido disipado por movimientos transcurrentes (Hervé. 1994)
� Zona de Falla Liquine­Ofqui (de Intrarco) (LOFZ) 39 a 48 S
� Geologia
� Zona Volcanica Sur (ZVS) 37 a 46 S y Batolito NorPatagonico (BNP) 39 a 47 S
� (Conjunto de plutones Mesozoico­Cenozoicos). Ambos representan el arco magmatico en esta
region.
� Gran heterogeneidad en la distribucion, intensidad y naturaleza en la deformacion de las rocas
en la zona de falla.
� Afecta, en groso modo, a rocas plutonicas y subordinadas rocas metamorficas y volcano­
sedimentarias como roca de caja.
� Zona de Falla Liquine­Ofqui (de Intrarco) (LOFZ) 39 a 48 S
� Geologia
� Zona Volcanica Sur (ZVS) 37 a 46 S y Batolito NorPatagonico (BNP) 39 a 47 S
� (Conjunto de plutones Mesozoico­Cenozoicos). Ambos representan el arco magmatico en esta
region.
� Gran heterogeneidad en la distribucion, intensidad y naturaleza en la deformacion de las rocas
en la zona de falla.
� Afecta, en groso modo, a rocas plutonicas y subordinadas rocas metamorficas y volcano­Zona
de Falla Liquine­Ofqui (de Intrarco) (LOFZ) 39 a 48 S
� Geologia
� Zona Volcanica Sur (ZVS) 37 a 46 S y Batolito NorPatagonico (BNP) 39 a 47 S
� (Conjunto de plutones Mesozoico­Cenozoicos). Ambos representan el arco magmatico en esta
region.
� Gran heterogeneidad en la distribucion, intensidad y naturaleza en la deformacion de las rocas
en la zona de falla.
� Afecta, en groso modo, a rocas plutonicas y subordinadas rocas metamorficas y volcano­
sedimentarias como roca de caja.
� sedimentarias como roca de caja.
� Zona de Falla Liquine­Ofqui (de Intrarco) (LOFZ) 39 a 48 S
� Geologia
� Zona Volcanica Sur (ZVS) 37 a 46 S y Batolito NorPatagonico (BNP) 39 a 47 S
� (Conjunto de plutones Mesozoico­Cenozoicos). Ambos representan el arco magmatico en esta
region.
� Gran heterogeneidad en la distribucion, intensidad y naturaleza en la deformacion de las rocas
en la zona de falla.
� Afecta, en groso modo, a rocas plutonicas y subordinadas rocas metamorficas y volcano­
sedimentarias como roca de caja.
� Zona de Falla Liquine-Ofqui (de Intrarco) (LOFZ) 39 a 48 S
� Geologia
� Zona Volcanica Sur (ZVS) 37 a 46 S y Batolito NorPatagonico (BNP) 39 a 47 S

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� (Conjunto de plutones Mesozoico-Cenozoicos). Ambos representan el arco magmatico en esta
region.
� Gran heterogeneidad en la distribucion, intensidad y naturaleza en la deformacion de las rocas en
la zona de falla.
� Afecta, en groso modo, a rocas plutonicas y subordinadas rocas metamorficas y volcano-
sedimentarias como roca de caja.
� Se observa que los centros volcanicos erodados presentan una asociacion espacial menos
estricta que los centros volcanicos cuaternarios, los ultimos concentrados en la cordillera andina
y en el entorno de la LOFZ.
� Se sigiere que el arco habria migrado al oeste del arco volcanico de fines del Plioceno, hasta la
actual posicion. Sin embargo, actualmente se deja de lado el concepto de arco volcanico linear,
para tomar un concepto de un complejo y amplia zona de expresion del volcanismo.
� Como explicarlo?
� => Cross y Pilger (1982) revisaron el efecto de las velocidades relativas de convergencia sobre la
posición de los arcos magmáticos. Antes, Molnar et al. (1979) habían propuesto una relación
empírica entre la velocidad de subducción, la edad de la placa subductada y la longitud de la
zona de Wadati-Benioff , que se escribe como L [km] = V [mm/año]xT[Ma]/10 (con L:
longitud de la zona sísmica; V: velocidad de subducción; T: edad de la placa subductada),
analizando su efecto en la geometría de los arcos volcánicos. En este caso, la velocidad de
convergencia entre las Placas de Nazca y Sudamericana sería el único parámetro que habría
experimentado variación relevante a fines del Plioceno. En efecto, Engebretson et al. (1986),
señalaron una variación de la velocidad, perpendicular y tangencial al margen, ocurrida cerca de
los 2 Ma. A partir de ese momento, y para la latitud 40°S, la velocidad de convergencia se habría
reducido de ca. 9 cm/año a los actuales 7,9 cm/año (DeMets et al., 1994; Tamaki, 2000).
� Ahora, adaptando la expresión empírica de Molnar et al. (1979) para un ángulo de subducción de
30° en los Andes del Sur (Cahill e Isacks, 1992), la longitud esperada mostraría,
cualitativamente, que una reducción de la velocidad de 9 cm/año a 7,9 cm/año justificaría la
disminución observada de hasta un 50% en el ancho de la región volcánica. Así, durante la
rápida convergencia del Plioceno (9 cm/año) se habría favorecido mayor actividad de la cuña
astenosférica.
� Por ultimo, cabe destacar la relevancia de la velocidad de subducción como factor de primer
orden en el control de la geometría del arco volcánico, y como recientemente se ha estudiado, su
efecto sobre el régimen de deformación que experimenta el arco volcánico en los Andes del Sur
en ese mismo período.

Entre los centros mejor conservados se encuentra el volcán Quinquilil (39°30ʹS­


71°35ʹW), que corresponde a un prominente cuello volcánico de 2.200 m de altura y
cuyos flancos consisten en coladas métricas de basalto de olivino. Se emplaza entre los
volcanes cuaternarios Quetrupillán y Lanín, en la cadena que une éstos y el volcán
Villarrica en el extremo occidental. A su vez, el volcán Sierra de Quinchilca (39°40ʹS­
72°00ʹW) corresponde a una estructura volcánica semianular de área expuesta cercana
a 25 km2, núcleo erosionado y flancos compuestos de niveles volcanoclásticos y lávicos
de composición andesítico­basáltica y basáltica. Las capas mixtas de sus flancos
presentan manteos radiales centrípetos y aparecen intruidas por cuellos y domos
laterales en su flanco oriental. Edades K­Ar en roca total, practicadas en coladas de
basalto de olivino de la parte alta del edificio, indican valores entre 1,4±0,6 y 0,8±0,6
Ma. Coladas de valle distales presentan siempre valores inferiores a 1 Ma.
A la misma latitud, en la zona fronteriza, se encuentran los volcanes Huanquihué
(39°53ʹS­71°34,5ʹW), Laguna Los Patos (39°35ʹS­71°38ʹW), Carirriñe (39°49ʹS­71°40ʹW),
Quelguenco (39°55ʹS­71°36ʹW), Pirihueico (39°58ʹS­71°37ʹW) y Chihuio
(40°10,5ʹS/71°49,5ʹW). El primero es un estratovolcán bien conservado que se emplaza
al sur del volcán Lanín, alcanza una superficie superior a los 50 km2 y sus emisiones,
principalmente lávicas, son de composición predominantemente basáltica a andesítico
basáltica (e.g., Corbella y Alonso, 1989). Su morfología es equivalente a la de otros
centros volcánicos de núcleo parcialmente preservados y dispuestos en la región

25
fronteriza, para los que se ha obtenido edades plio­pleistocenas. En su flanco norte se
ha edificado el cono monogénico postglacial El Escorial o Achen Niyeu (e.g., Inbar et
al., 1995). Los segundos, corresponden a centros eruptivos coalescentes que conservan
bien los cuellos volcánicos o los diques alimentadores de la región central. Sus
productos, principalmente efusivos, son de composición basáltica a andesítico basáltica
y forman una amplia meseta en la zona fronteriza. Determinaciones K­Ar roca total
indican para el volcán Pirihueico una edad de 1,5±0,7 Ma y 0,7±0,2 Ma para el volcán
Quelguenco.
Más al sur, entre los lagos Ranco y Puyehue, se encuentra la caldera Cordillera Nevada
(40°27,5ʹS­72°15ʹW), una estructura semianular de 9 km de diámetro, emplazada al
noroeste del volcán Puyehue y en la culminación occidental del centro fisural Cordón
Caulle. Esencialmente anterior a la última glaciación, se advierte también centros
emisores más modernos dispuestos en una falla anular y un cono erosionado en el
interior de la depresión caldérica. Los productos incluyen composiciones desde
basálticas hasta riolíticas (Moreno, 1977; Campos et al., 1998). Las edades radiométricas
reportadas para la secuencia pre­caldera alcanzan una edad máxima de 1,4±0,6 Ma.
En las cercanías de la caldera Cordillera Nevada se emplazan los complejos volcánicos
Mencheca (40°32ʹS­72°02ʹW), Sarnoso (40°49,5ʹS­72°17,3ʹW), Fiucha (40°41,5ʹS­
72°12,3ʹW), y Cordón de Alvarez. (40°45ʹS­72°05ʹW). El complejo Mencheca es un
conjunto de estructuras volcánicas preglaciarias, emplazado al este del volcán
Puyehue. Está constituido por una estructura central erosionada con desarrollo de
anfiteatro abierto al este, sobre la que se disponen los maares holocenos de Los Ñirres y
los cráteres de Pichi­Golgol. Moreno (1977)reporta una edad K­Ar roca total de
0,53±0,44 Ma para la unidad basal, de composición basáltica. El Complejo Sarnoso,
emplazado al suroeste del volcán Casablanca, corresponde a un aparato central
erosionado sobre el que se han edificado conos de piroclastos, algunos postglaciales y
alineados en dirección norte­sur (e.g., A. Pino, 1983)2. La composición de sus unidades
lávicas es predominantemente andesítico­basáltica. El Complejo Fiuchá, dispuesto al
noroeste del volcán Casablanca, corresponde a un estratovolcán­caldera cuyas
emisiones son de composición esencialmente basáltica. A su vez, el complejo Cordón
de Alvarez corresponde a un cordón fisural de orientación SSE cuyos remanentes,
aglomerados y lavas, son de composición andesítico basáltica.
A la misma latitud, en la región fronteriza, se encuentran mejor preservados los
volcanes Mirador (40°41ʹS­71°55,5ʹW) y Pantojo (40°43,5ʹS­71°57,5ʹW). El volcán
Mirador es un aparato central que cubre una superficie de ca. 30 km2 y sus productos
son predominantemente basálticos. La zona central del edificio está fuertemente
erosionada y sólo se han preservado las lavas de flanco, que exhiben intensa erosión
glaciaria. A su vez, el volcán Pantoja es un edificio donde destaca particularmente un
cuello volcánico y las lavas de flanco, en parte erosionadas y de composición
predominantemente basáltica. Más al sur, entre los volcanes Osorno y Puntiagudo, se
encuentra el volcán La Picada (41°03ʹS­72°25ʹW) que corresponde a un aparato
compuesto erosionado, de composición principalmente basáltica y superficie expuesta
de ca. 50 km2. Este centro compuesto está constituido por dos estructuras
semianulares, que exponen los núcleos brechosos disectados por abundantes diques
radiales de composición basáltica y, en menor proporción, dacítica. Desde el perímetro
de los centros emisores se extienden flujos lávicos entre los que se intercalan
conglomerados laháricos y delgados horizontes de tefra. Estas sucesiones alcanzan

26
sobre 1000 m de espesor y engranarían con los Estratos de Chapuco (H. Moreno, J.
Varela, L. López­Escobar, F. Munizaga y A. Lahsen), dispuestos entre los lagos
Rupanco y Llanquihue. Determinaciones K­Ar en roca total han indicado 0,5±0,1 Ma
(H. Moreno, J. Varela, L. López­Escobar, F. Munizaga y A. Lahsen) para un dique
alimentador del centro de emisión noroccidental.
Finalmente, al este del lago Todos los Santos se emplazan los volcanes Tronador
(41°10ʹS­72°16ʹW) y Cuernos del Diablo (41°25ʹS­71°50ʹW). El primero corresponde a un
estratovolcán mixto con erosión glaciaria profunda cuyas emisiones lávicas incluirían
desde basaltos a andesitas silíceas, algunas postglaciales. El volcán Cuernos del Diablo
corresponde a una estructura compuesta erodada, formada por tres cuellos y una
sucesión de brechas y coladas basálticas o andesítico basálticas en similar estado de
conservación. En coladas basales se ha obtenido una edad de 0,7±0,4 Ma
(SERNAGEOMIN­BRGM, 1995).
Algo más erosionados que los anteriores, generalmente con morfología superficial
plana, se reconoce otros grupos volcánicos como el Complejo Nevados de Caburgua
(39°10ʹS­71°32ʹW), una estructura semianular donde un conjunto de capas lávicas y
depósitos piroclásticos, de flujo y caída, circundan con manteos radiales a un lacolito
parcialmente seccionado. Las capas, que incluyen conspicuos niveles de oleada y tefras
de lapilli escoriáceo y lítico, presentan lavas columnares de composición andesítico
silícea intercaladas en las que se ha obtenido edades de 2,4±0,5 y 0,8±0,5 Ma K­Ar en
roca total.
Al oriente del anterior, se emplaza el Complejo Cerro Trautrén (39°10ʹ­71°27ʹ), un
conjunto de lavas dacíticas y aglomerados en las que se ha obtenido edades K­Ar roca
total de 0,8±0,4 y 0,5±0,3 Ma. Algo al sur, el Complejo Cerro Maichín (39°21ʹS­71°33ʹW)
corresponde a una reducida sucesión de lavas y brechas junto a coladas de valle
dispuestas en torno de la secuencia principal. En lavas de la serie principal se ha
obtenido una edad de 0,9±0,7 Ma.
Mayor profundidad de erosión representa un conjunto de secuencias volcánicas
subhorizontales, principalmente lávicas con intercalaciones de conglomerados y tobas,
que se reconoce generalmente al oeste de los centros emisores antes descritos. Entre
ellas, la Formación Malleco (Suárez y Emparan, 1997) corresponde a una extensa
sucesión de facies volcánicas proximales y distales en la que se intercalan depósitos
laháricos y niveles epiclásticos. Se distribuye ampliamente en el sector occidental de la
cordillera de los Andes, entre los 38 y 39,5°S. Está constituida, principalmente, por
basaltos, andesitas basálticas y, en menor proporción variedades silíceas, formando
secuencias subhorizontales que cubren basamento granítico. En algunos sectores se
reconocen relictos de facies centrales aunque normalmente los centros emisores se
encuentran erosionados. Entre los 38 y 39°S, Suárez y Emparan (1997) presentan
edades K­Ar entre 4,4±0,5 y 0,8±0,3 Ma para niveles lávicos de esta unidad. Las edades
pliocenas se han obtenido en niveles basales posiblemente equivalentes a otras
unidades volcánicas descritas más al sur (Estratos de Pitreño (40°S); Campos et al.,
1998). No obstante, los escasos centros emisores reconocidos presentan edades que
promedian ca. 2,0 Ma, los flujos lávicos superiores alcanzanca. 1,7 Ma y las coladas de
valle tardías ca. 0,8 Ma. La Formación Malleco es cronológicamente equivalente a la
ʹAsociación volcánica de la precordillera orientalʹ (Suárez y Emparan, 1997), unidad
informal que incluye a los centros volcánicos dispuestos en la franja NNW extendida
entre las fallas Bíobío­Aluminé y Cordillera del Viento (38­39°S). Es también

27
equivalente, en parte, a la Formación Cola de Zorro (González y Vergara, 1962) que se
extiende en la cordillera principal, aproximadamente entre los 35 y 38°S.
Asimismo, los Estratos de Chapuco (H. Moreno, J. Varela, L. López­Escobar, F.
Munizaga y A. Lahsen)3corresponden a una secuencia volcánica subhorizontal en
similar estado de conservación y dispuesta al sur del Lago Rupanco. En ella, brechas
volcánicas y conglomerados se intercalan en una sucesión de hasta 1300 m de basaltos
columnares en los que se ha obtenido edades K­Ar de 1,0±0,3 Ma (SERNAGEOMIN­
BRGM, 1995)4, 0,4±0,1 y 0,6±0,5 Ma. Engranan hacia el sur con las secuencias
volcánicas basales del volcán La Picada, de las que constituirían facies distales. A su
vez, al este del volcán Calbuco, se dispone una secuencia volcanosedimentaria
denominada Estratos de Hueñu­Hueñu (H. Moreno, J. Varela, L. López­Escobar, F.
Munizaga y A. Lahsen 1985). Ella corresponde a una sucesión de hasta 550 m de
espesor donde dominan facies laháricas gruesas sobre brechas volcánicas y basaltos
columnares. Uno de estos basaltos presenta una edad K­Ar en roca total de 1,43±0,20
Ma (H. Moreno, J. Varela, L. López­Escobar, F. Munizaga y A. Lahsen 1985).
Remanentes de un centro de emisión se reconoce en el cerro Cañe, constituido por un
cuello de basaltos macizos rodeado de capas lávicas y brechosas de manteo centrípeto.
Finalmente, en la cabecera del fiordo de Reloncaví se reconocen los Estratos de
Reloncaví (H. Moreno, J. Varela, L. López­Escobar, F. Munizaga y A. Lahsen), que
corresponden a una secuencia volcánica subhorizontal dispuesta en la ladera oriental
del fiordo homónimo y los valles de los ríos Cayutué y Cachimba. Alcanza hasta 400 m
de espesor donde alternan brechas volcánicas, tobas y basaltos de olivino. En estos
últimos, H. Moreno, J. Varela, L. López­Escobar, F. Munizaga y A. Lahsen3 han
obtenido una edad K­Ar de 0,27±0,20 Ma.

CENTROS VOLCANICOS PLIOCENO-CUATERNARIOS ORIENTALES


Las rocas volcánicas del Plioceno y Cuaternario en la vertiente oriental de la cordillera
andina presentan, entre los 38° y 41°S, una disposición divergente del arco volcánico
cuaternario, organizándose en una franja de rumbo NNW (e.g., Turner, 1965; Muñoz y
Stern, 1988; Delpino y Deza, 1995). En estrecha asociación a estructuras de la cobertura
mesozoica en la provincia del Neuquén, representan una voluminosa acumulación de
basaltos de ʹplateauʹ, estratovolcanes, calderas y conos monogénicos.
Las facies volcánicas de escudo, que forman vastas mesetas dispuestas entre la Falla
Biobío­Aluminé (Suárez y Emparan, 1997) y la Cordillera del Viento, conservan
ocasionalmente parte de los centros emisores y presentan edades comprendidas entre
4,5 y 0,8 Ma (Drake et al., 1976; Muñoz y Stern, 1988, Linares et al., 1999). A esta franja
pertenecen centros tales como Las Monjas, Rahue, Butahuao, Pino Solo y las unidades
basales del volcán Copahue.
Sobrepuestos o engranando con las unidades volcánicas anteriores, se encuentran
centros volcánicos mejor preservados que corresponden a aparatos centrales y cuyas
edades alcanzan desde el Plioceno Superior hasta el Pleistoceno Medio (2,0­0,3 Ma;
Muñoz y Stern, 1988). A este conjunto pertenecen centros tales como Cerro Trolón,
Pino Hachado, Cerro Cochicó, Palao Mahuida, Queli Mahuida, Cerro Cansino y las
Mesetas Cayulafquén y Arco.
Asimismo, ocupando similar posición que los anteriores y especialmente en los valles
del río Aluminé y del río Agrio, se emplazan numerosos centros monogénicos
cuaternarios que han construido conos de piroclastos y cuyos derrames lávicos forman

28
mesetas como las de Loncoloan y Laguna Blanca. Mientras los centros volcánicos
pliocenos exhiben una señal geoquímica subalcalina, aquellos del Plioceno alto­
Pleistoceno y también los holocenos, resultarían característicamente alcalinos (Muñoz y
Stern, 1989).

GEOCRONOLOGIA
Los antecedentes geocronológicos del volcanismo cenozoico superior, en los Andes del
Sur, son relativamente escasos. El análisis volcanoestratigráfico ha producido avances
en el contexto de levantamientos regionales, especialmente en la última década,
permitiendo al menos una cronología relativa de los eventos volcánicos. Ello sobre la
base de criterios geomorfológicos, particularmente el estado de denudación e
intensidad de la erosión glacial en los centros volcánicos. Así, se han descrito desde
secuencias volcánicas aisladas, centros volcánicos desmantelados donde aún se
reconoce cuellos, borde de calderas o flujos lávicos radiales, hasta edificios bien
conservados cuya estratigrafía interna se ha definido mediante los eventos glaciales
intercalados (e.g., Moreno y Parada, 1976; Campos et al., 1998). Precisiones cuantitavas
sólo han sido realizadas sistemáticamente en depósitos piroclásticos postglaciales
mediante 14C.
En términos generales, la aplicación de métodos radiométricos a rocas volcánicas de ca.
1 Ma ha sido complejo, particularmente en rocas básicas, y su progreso ha estado
relacionado estrechamente con los avances tecnológicos. De este modo, Mahood y
Drake (1986) mostraron la factibilidad de datar con K­Ar rocas silíceas jóvenes, entre 5
y 150 Ka, usando sanidina y vidrio. Más tarde, Singer et al. (1997) señalaron la
coherencia entre determinaciones K­Ar y 40 Ar­39Ar con fusión completa en roca total.
Recientemente, Lanphere (2000), realizó un estudio comparativo entre ambos sistemas,
usando roca total y calentamiento por pasos, en rocas máficas menores que 1 Ma,
mostrando la aplicabilidad de ambos métodos. Este autor concluye que ambos
métodos permiten determinaciones de alta calidad aunque, sin duda, la
reproducibilidad de una edad ʹplateauʹ será superior con una dispersión de la precisión
analítica bajo el 2%. Sin embargo, estos métodos deben considerarse complementarios
puesto que, por ejemplo en ejemplares de grano muy fino o con algo de vidrio en la
masa, el método K­Ar puede ser la única forma de obtener una edad exacta y precisa
(Lanphere, 2000).
Entre las dificultades, Singer et al. (1998) señalaron el riesgo de encontrar xenocristales
de plagioclasa con Ar extraño, indistinguibles de la plagioclasa juvenil, que
distorsionarían el significado de una determinación en roca total. Mientras, Lanphere
(2000) sugería que, considerando que el K en la masa fundamental se concentra 4­5
veces más que en la plagioclasa, es aún factible datar roca total en ejemplares máficos.
En este trabajo se ha evitado muestras con plagioclasa parcialmente alterada,
fracturada o resorbida. Los rasgos geoquímicos discutidos más adelante confirman,
además, escasa interacción con la corteza. Seguidas las recomendaciones petrográficas
de Dalrymple y Lanphere (1969) y Mankinen y Dalrymple (1972), la confiabilidad de
los valores dependerá de los equipos y de factores geológicos.
Así, habida consideración de las restricciones instrumentales y metodológicas, se ha
efectuado estas determinaciones para realizar comparaciones regionales. Las muestras
colectadas corresponden a flujos independientes que pertenecen a unidades
volcanoestratigráficas de valor regional, definidas según el grado de erosión glacial y

29
relación de corte y relleno. Además, en algunos complejos volcánicos los ejemplares
cumplen una relación de superposición observada. Las muestras fueron extraídas del
nivel macizo de lavas o diques alimentadores. Ellas corresponden, principalmente, a
basaltos y andesitas basálticas de olivino y clinopiroxeno, con 10­50% de fenocristales
en masas intergranulares mientras los ejemplares de mayor contenido de sílice,
minoritarios, corresponden a andesitas síliceas y dacitas de clinopiroxeno, con 13­45%
de fenocristales en masas intersertales.
Los valores informados (Tabla 1) fueron obtenidos en el Laboratorio de Geocronología
de SERNAGEOMIN. El análisis de K se realizó en triplicado en espectrómetro de
absorción atómica con estándar de Li. El Ar se determinó por dilución isotópica y
lectura en un espectrómetro de masas AE1­MS­10S. En algunos casos el análisis fue
duplicado obteniendo una edad media ponderada.
Estos valores muestran que los edificios volcánicos y secuencias volcanosedimentarias
con rasgos de erosión profunda en la cordillera de los Andes, presentan edades que
pueden alcanzar principalmente desde el Plioceno Superior al Pleistoceno Medio,
según las escalas de Gradstein y Ogg (1996) y Shackleton y Opdyke (1977). Los datos
presentan un error en la precisión analítica (1 s) que alcanza entre 5 y 50% para edades
entre 0,4 y 1 Ma. Para valores mayores a 1 Ma se reduce a 5­25%. Esto significa que, con
un 95% de certeza (2 s), 34 de las 45 edades comentadas pertenecerían al intervalo
Plioceno Superior­Pleistoceno Medio (3,6­0,13 Ma); de ellas 12 podrían alcanzar el
Plioceno Superior (3,6­1,8 Ma) mientras sólo una se encontraría estrictamente en este
último intervalo.
En todo caso, los valores obtenidos son consistentes con la posición estratigráfica de los
ejemplares colectados. Ello es claro en el Complejo Cerro Trautrén, Complejo Nevados
de Caburgua, Sierra de Quinchilca y Cordillera Nevada. En este último, por ejemplo, la
edad de 1,4±0,6 Ma reportada por Campos et al. (1998) proviene de un nivel lávico
dispuesto en la base de la secuencia pre­caldera, apoyada a su vez sobre rocas
volcánicas mioceno­pliocenas (ca. 3­6 Ma), mientras aquella de 1,2±0,3 Ma corresponde
a la unidad de relleno más antigua. De este modo, además, ambas acotarían la edad del
colapso en el Pleistoceno Inferior bajo (1,8­0,79 Ma).
De igual modo, los valores reportados por Muñoz y Stern (1988) y Linares et al. (1999)
para centros volcánicos dispuestos sobre el bloque Copahue­Pino Hachado, en
Argentina, resultan semejantes señalando que los episodios volcánicos de ese intervalo
habrían ocurrido simultáneamente en una ancha franja que alcanzaba desde el frente
cordillerano hasta los bloques alzados orientales.
A su vez, y aunque no existen estudios sistemáticos recientes, las escasas edades
disponibles para las unidades basales de los estratovolcanes modernos, erosionadas
pero indudablemente asociadas al mismo centro emisor, sustentan preliminarmente la
idea de que ellos habrían sido edificados, esencialmente, desde el Pleistoceno Medio
(<0,79 Ma).
Los datos geoquímicos disponibles incluyen básicamente elementos mayores y tierras
raras de rocas volcánicas pertenecientes a los centros mejor reconocidos. Los
ejemplares colectados incluyen predominantemente variedades básicas, aunque cubren
un amplio espectro composicional. La mineralogía es, sin embargo, semejante con la
sola ausencia de olivino en las variedades más silíceas. Además de éste, clinopiroxeno,
plagioclasa cálcica y en menor medida magnetita, constituyen fases comunes inmersas
en una masa intersertal o intergranular que constituye entre el 55 y 85% de las

30
secciones. Los óxidos de elementos mayores, revisados con sílice como índice de
diferenciación, muestran distribuciones lineales que sugieren la cristalización
fraccionada de plagioclasa, clinopiroxeno y magnetita, hipótesis compatible con la
conducta de elementos en trazas como Sc, V, Cr y Co. El análisis comparado del
conjunto en un gráfico de SiO2 versus K2O muestra tanto la amplia variedad
composicional como su pertenencia mayoritaria al dominio calcoalcalino. Las
variedades más silíceas, al mismo tiempo de alto K, corresponden a domos
erosionados o lavas macizas de los centros volcánicos fronterizos (Quelguenco,
Carirriñe, Chihuio). En conjunto, los ejemplares presentados ocupan idéntico campo
que las rocas volcánicas cuaternarias de los Andes del Sur (e.g., López­Escobar et al.,
1993). Resultan, asimismo, característicamente más pobres en K2O que las unidades
pliocenas del bloque Copahue­Pino Hachado y aún más que aquéllas del Plioceno alto­
Pleistoceno de esa región (e.g., Muñoz y Stern, 1988). Por otra parte, el patrón de tierras
raras se presenta marcadamente plano en todos los ejemplares disponibles, con valores
enriquecidos respecto del condrito entre 8 y 23 veces para las tierras raras pesadas y
hasta 55 en las livianas. Las variedades más silíceas (Cordillera Nevada) presentan una
incipiente anomalía de Eu, tradicionalmente asociada a fraccionamiento de plagioclasa.
Los patrones presentados son semejantes a los que exhiben las rocas volcánicas de los
centros pleistoceno­holocenos de la cordillera principal (e.g., Hickey­Vargas et al., 1989;
López et al., 1993). Los gráficos incluyen sólo variedades intermedio básicas; aquellas
más silíceas pueden mostrar mayores contenidos de tierras raras livianas como es
también común en los magmas modernos de la Zona Volcánica Sur (e.g., Hickey­
Vargas et al., 1989; Gerlach et al., 1988; Lara, 1997). Estos valores, además, son
característicamente más pobres en tierras raras livianas que las unidades volcánicas de
la vertiente argentina. El contenido de tierras raras pesadas es esencialmente similar.
En un diagrama de Ba/La versus La/Sm puede apreciarse la progresión gradual de
ambos cuocientes desde los centros plio­pleistocenos occidentales hasta los
emplazados en el extremo este del arco volcánico. Se aprecia, además, que ellos cubren
básicamente el mismo espectro reconocido en las rocas volcánicas cuaternarias de la
Zona Volcánica Sur. La variación lineal de las razones Ba/La y La/Sm es también
proporcional a la actual distancia de la fosa, anotada en términos relativos para el arco
plio­pleistoceno y cuaternario, respectivamente. En ese contexto, la variación de la
razón Ba/La, interpretada usualmente como trazador de los componentes de
subducción, y aquélla mostrada por La/Sm, indicativa del grado de fusión parcial de la
fuente astenosférica, señalan idéntica variación transversal en cada arco volcánico,
aunque verificada en un dominio espacial diferente.
Los antecedentes geocronológicos disponibles muestran que en la cordillera principal
ha existido actividad volcánica persistente desde el Plioceno. Con las limitaciones
metodológicas comentadas, las determinaciones K­Ar en rocas de ca. 1­2 Ma muestran
consistentemente que, entre los 38° y 42°S, ellas definen una franja de hasta 250­300 km
de ancho, que incluye desde el frente volcánico hasta los bloques alzados en territorio
argentino. En esta franja, los centros volcánicos erodados no presentan una asociación
espacial estricta con estructuras de carácter regional. En cambio, los centros volcánicos
cuaternarios muestran una distribución más estrecha, concentrada en la cordillera
andina y en el entorno de la Falla Liquiñe­Ofqui. Sólo centros eruptivos menores
representan la actividad volcánica cuaternaria en la región oriental. Antes de conocer
edades plio­pleistocenas en el frente volcánico, Stern (1989) y Muñoz y Stern (1988,

31
1989) sugerían, para el segmento situado al sur de los 38°S, una migración al oeste del
arco volcánico que habría ocurrido al final del Plioceno, consolidando su actual
posición en el Cuaternario. Sin embargo, los antecedentes presentados permiten ahora
otra explicación. Para ello es necesario advertir previamente, en contraposición a la
idea de arcos volcánicos `linealesʹ como expresión única del volcanismo en zonas de
subducción, la compleja configuración que puede adquirir su arquitectura y las
significativas variaciones transversales que en ella se puede constatar. De este modo,
aunque la amplia franja del Plioceno Superior­Pleistoceno muestra una señal
geoquímica característica de arco, variaciones internas se aprecian especialmente en el
aumento progresivo al este de la razón La/Sm y una moderada atenuación del
cuociente Ba/La. Ambos rasgos son compatibles con menores grados de fusión parcial
y atenuación de los componentes de subducción según aumenta la distancia a la fosa.
En efecto, las rocas volcánicas cuaternarias muestran similar transición pero verificada
en un dominio más estrecho. Un ejemplo nítido de lo anterior se advierte en la cadena
transversal que une los volcanes Villarrica y Lanín. Más aún, rocas volcánicas
holocenas, con señales geoquímicas típicas de ambientes de trasarco (Ba/La<20; La/Sm
>5 ; La/Ta<25), ocurren esta vez muy cerca de la cordillera andina. Para explicar el
escenario descrito existen algunas hipótesis. Stern (1989) justificaba la posible
migración del arco volcánico invocando acreción en el margen o aumento del ángulo
de subducción. Como se ha establecido, el proceso verificado en el arco volcánico al sur
de los 38°S, en la transición del Plioceno al Cuaternario, no correspondería a una
migración sino a una reducción del ancho de la zona volcánica, manteniendo el mismo
frente activo. Por lo tanto, aunque no puede descartarse el efecto de esos factores, éste
sería teóricamente incompatible con la posición estática del frente volcánico y, luego,
ellos no serían útiles para explicar la nueva configuración.
Por otra parte, y en términos más globales, Cross y Pilger (1982) revisaron, entre otros,
el efecto de las velocidades relativas de convergencia sobre la posición de los arcos
magmáticos. Antes, Molnar et al. (1979) habían propuesto una relación empírica entre
la velocidad de subducción, la edad de la placa subductada y la longitud de la zona de
Wadati­Benioff , que se escribe como L [km] = V [mm/año]xT[Ma]/10 (con L: longitud
de la zona sísmica; V: velocidad de subducción; T: edad de la placa subductada),
analizando su efecto en la geometría de los arcos volcánicos. En nuestro caso, la
velocidad de convergencia entre las Placas de Nazca y Sudamericana sería el único
parámetro que habría experimentado variación relevante a fines del Plioceno. En
efecto,Engebretson et al. (1986), señalaron una variación de la velocidad, perpendicular
y tangencial al margen, ocurrida cerca de los 2 Ma. A partir de ese momento, y para la
latitud 40°S, la velocidad de convergencia se habría reducido de ca. 9 cm/año a los
actuales 7,9 cm/año (DeMets et al., 1994; Tamaki, 2000).
Ahora, adaptando la expresión empírica de Molnar et al. (1979) para un ángulo de
subducción de 30° en los Andes del Sur (Cahill e Isacks, 1992), la longitud esperada
mostraría, cualitativamente, que una reducción de la velocidad de 9 cm/año a 7,9
cm/año justificaría la disminución observada de hasta un 50% en el ancho de la región
volcánica.
Con el análisis anterior se ha querido enfatizar la relevancia de la velocidad de
subducción como factor de primer orden en el control de la geometría del arco
volcánico. Recientemente, otros autores (e.g., Lavenu y Cembrano, 1999) han sugerido
también su efecto sobre el régimen de deformación que experimenta el arco volcánico

32
en los Andes del Sur en ese mismo período. Los antecedentes presentados señalan la
ocurrencia de centros volcánicos erosionados en la cordillera andina, de morfología
semejante a los descritos en la vertiente argentina. Las edades K­Ar, congruentes con el
estado de conservación de los centros volcánicos, muestran la existencia de un amplio
arco volcánico en el Plioceno Superior­Pleistoceno, extendido desde el frente
cordillerano hasta los bloques alzados orientales. En ese dominio, la distribución de los
centros volcánicos muestra una relación espacial menos estricta con las estructuras
regionales (Falla Liquiñe­Ofqui, Falla Biobío­Aluminé) que la exhibida por los volcanes
cuaternarios. Las características geoquímicas de las rocas volcánicas plio­pleistocenas
de la cordillera principal (menor razón La/Sm; mayor razón Ba/La que sus equivalentes
en Argentina) muestran una tendencia gradual de variación hacia el este que reflejaría
disminución progresiva del grado de fusión parcial y atenuación de los componentes
de subducción. Esta conducta es similar a la observada en centros volcánicos
cuaternarios organizados en cadenas transversales (e.g., Hickey­Vargas et al., 1989),
pero verificada en un dominio más estrecho. Adaptando el argumento de Molnar et al.
(1979) que vincula velocidad de subducción y longitud de la zona de Wadati­Benioff,
se puede sugerir el efecto de primer orden que establecería la velocidad de subducción
sobre la geometría del arco volcánico. Así, durante la rápida convergencia del Plioceno
(9 cm/año) se habría favorecido mayor actividad de la cuña astenosférica. Su
disminución en el Cuaternario (7,9 cm/año) sería responsable de la reducción en el
ancho de la región volcánica, ocurrida posiblemente después del Pleistoceno Medio.

33
Algunos antecedentes de actividad sísmica
(se aclara que los eventos registrados en Chile tienen gran incidencia en el sector de Villa La Angostura y la cordillera del
Neuquén)

Al no haber lenguaje escrito previo a la llegada de los españoles, deberemos basarnos en los
documentos por ellos realizados para tener una relación de los primeros terremotos en Chile.
Valiosos han sido los aportes de sacerdotes Jesuitas como el padre Escobar (no se registra su
nombre) o el padre Diego de Rosales, quienes han registrado los terremotos de 1570 y 1575
como los primeros de intensidad notable en nuestra historia posterior al descubrimiento por
los españoles.

TERREMOTO DE 1570
El 8 de Febrero de 1570, alrededor de las nueve de la mañana, la celebración del miércoles
de ceniza fue interrumpida en Concepción por un fuerte terremoto que derrumbó la mayor
parte de la ciudad a sólo veinte años de su fundación. Las crónicas relatan que la tierra se
habría abierto en varios lugares manando desde su interior un agua negra con olor a azufre.
Un violento maremoto destruyó, al cabo de algunos momentos, lo poco que quedaba en pie.
No se reportaron víctimas fatales, pero se informó de intentos de saqueo de parte de la
población indígena, los que habrían resultado infructuosos a pesar de la vulnerabilidad en que
había quedado el asentamiento.
Después de ese episodio se decidió erigir una ermita para homenajear a la Virgen María
cada año con una procesión descalza que incorporara a todo el pueblo.
La destrucción de los archivos que la Real Enmienda había confeccionado en sus tres años
de funcionamiento en Concepción, hizo que se decretara su traslado y el de sus oidores.

TERREMOTOS DE 1575
El 17 de Marzo a las 10 de la mañana hubo en Santiago un sismo que agrietó las casas y
causó alarma en la población. Antes de finalizar el año, el 16 de Diciembre de 1575, un nuevo
terremoto, esta vez de mayor fuerza, arruinó las ciudades del sur del país. El padre Escobar,
basado en los manuscritos de Mariño de Lobera, corregidor de Valdivia, relata:
"Hora y media antes del anochecer comenzó a temblar la tierra con gran rumor y
estruendo yendo siempre el terremoto en crecimiento sin cesar de hacer daño derribando
tejados, techumbres y paredes, con tanto espanto de la gente que estaban atónitas y fuera de
sí de ver un caso tan extraordinario. No se puede pintar ni describir la manera de esta furiosa
tempestad que parecía ser el fin del mundo, cuya priesa (sic) fue tal, que no dio lugar a muchas
personas a salir de sus casa, y así perecieron enterradas en vida, cayendo sobre ellas las
grandes machinas de los edificios."
"Era cosa que erizaba los cabellos y ponía los rostros amarillos, el ver menearse la tierra
tan a priesa, y con tanta furia que no solamente caían los edificios, sino también las personas
sin poderse detener en pie, aunque se asían unos de otros para afirmarse en el suelo."
"Demás desto, mientras la tierra estaba temblando por espacio de un cuarto de hora, se
vio en el caudaloso río, por donde las naos suelen subir sin riesgos, una cosa notabilísima, y fue
que en cierta parte dél se dividió el agua corriendo la una parte de ella hacia la mar y la otra
parte río arriba, quedando en aquel lugar el suelo descubierto; de suerte que se veía las
piedras como las vio Pedro de Lobera de quién saqué esta historia, el cual afirma haberla visto
por sus ojos. Ultra desto salió la mar de sus límites y linderos corriendo con tanta velocidad por
la tierra adentro, como el río de mayor ímpetu del mundo. Y fue tanto su furor y braveza, que
entró tres leguas por la tierra adentro, donde dejó gran suma de peces muertos, de cuyas
especies nunca se habían visto otras en este reino."
"Aun en campo raso ­ continúa Mariño de Lobera ­ no estaban del todo seguras las
personas, porque por muchas partes se abría la tierra frecuentemente con los temblores, que
sobrevenían cada media hora sin cesar esta frecuencia por espacio de cuarenta días."

34
Rodrigo de Quiroga, gobernador de Chile en esa época, relataba por su parte, en carta de
2 de Febrero de 1576 al rey:
"En un momento derribó las casas y templos de cinco ciudades, que fueron La Imperial,
Ciudad Rica (Villarrica), Osorno, Castro y Valdivia, y salió la mar de su curso ordinario, de tal
manera que en la costa de La Imperial se ahogaron casi cien ánimas de indios (ya los indios
tenían alma), y en el puerto de Valdivia dieron al través dos navíos que allí estaban surtos, y
mató el temblor veintitantas personas, entre hombres, mujeres y niños"... "Yo he mandado a
hacer plegarias y procesiones, suplicando a Nuestro Señor aleje de nosotros su indignación."
Los desastres tuvieron también influencia en los huilliches, aborígenes de la zona que
habían logrado una buena convivencia con los españoles, pero que al ver sus ciudades y
fuertes destruidos se decidieron a rebelarse librándose varias batallas con resultados
generalmente favorables a los conquistadores, pero que vinieron a arruinar aún más aquella
zona, que era entonces la más próspera del país.

LAGO RIÑIHUE 1575


Tal como estuvo a punto de ocurrir en Mayo de 1960, el cataclismo desplomó un cerro
vecino a la salida del lago Riñihue, afluente del río Valdivia, lo que provocó la acumulación de
una inmensa cantidad de agua, al no poder bajar normalmente hacia el mar. Al cabo de cuatro
meses, esta "represa" accidental cedió con las consecuencias previsibles para los lugareños. El
capitán Mariño de Lobera, corregidor de Valdivia, dispuso la evacuación de todos los
habitantes y sus efectos a las partes altas, previendo el desenlace. Esto aminoró un poco los
afectos de la avalancha. Dejemos que él mismo lo cuente:
"Tanto por la cantidad de agua acumulada, como por estar el lugar alto, salió bramando y
hundiendo el mundo sin dejar casa de cuanta hallaba por delante que no llevase consigo. Y no
es nada decir que destruyó muchos pueblos circunvecinos anegando a los moradores y a los
ganados, mas también sacaba de cuajo los árboles por más arraigados que estuviesen. Y por
ser esta avenida a medianoche, cogió a toda la gente en lo más profundo del sueño, anegando
a muchos en sus camas, y otros al tiempo que salían dellas despavoridos. Y los que mejor
libraran eran aquellos que se subieron sobre los techos de sus casas, cuya armazón era de palos
cubierto de paja y totora como es costumbre entre los indios. Porque, aunque las mesmas
casas eran sacadas de sus sitios, y llevadas por la fuerza del agua, con todo eso por ir muchas
de ellas enteras como navíos, iban navegando como si lo fuera y así los que iban encima podían
escaparse, mayormente siendo indios, que es gente muy cursada en andar en el agua."
Los habitantes refugiados en las partes altas se encontraron pronto rodeados por la
avenida. Las casas pasaban arrastradas por la corriente, muchas con sus pobladores encima de
ellas, e iban a perderse en el mar. Los indios se desprendían de los ranchos, al aproximarse a
los islotes: algunos lograron salvarse ganando a nado las riberas; el golpe de los troncos de los
árboles mató a muchos, y los más, murieron enredados en las ramas o arrastrados por el
ímpetu de la corriente:
"Esto mesmo hacían los caballos, y otros animales, que acertaban a dar en aquel sitio,
procurando guarecerse entre la gente con el instinto natural que les movía"..."En ese tiempo no
se entendía otra cosa, sino en disciplinas, oración y procesiones, todo envuelto en hartas
lágrimas para vencer con ellas la pujanza del agua, aplacando al Señor que las
movía"..."Finalmente, fue bajando el agua al cabo de tres días, habiendo muerto más de mil
doscientos indios, y gran número de reses, sin contarse aquí la destrucción de casas, chacras y
huertas, que fuera cosa inaccesible."

VERSIÓN MAPUCHE
Cada vez que temblaba, los aborígenes corrían a los cerros ( donde habitaba el Ten Ten)
con sus hijos y comida para varios días transportada en platos de madera sobre sus cabezas. Le
temían al gran diluvio, que ya había ocurrido antes, debido a que el dios de las aguas, una
enorme culebra llamada Cay Cay, hacía salir las aguas del mar súbitamente para sorprender y

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destruir al dios de la tierra (Ten Ten o Tren Tren) acabando de paso con toda la gente. Ten Ten
les había aconsejado ascender hasta los cerros más altos so pena de ser convertidos en peces,
animales marinos o rocas a los que no lo hicieran. Ya una vez había ocurrido tal cosa años
atrás, cuando Cay Cay hizo subir las aguas de tal manera que aún los hombres en las cimas de
los cerros peligraban ser inundados. Tuvo entonces Ten Ten que hacer subir los cerros para
salvarlos. Tan alto subió los cerros, hasta cerca del sol, que los hombres comenzaron a sufrir
insolación, de la que se salvaron cubriendo sus cabezas con los platos de madera en que
habían llevado sus víveres. Cay Cay no pudo más y tuvo que replegarse lleno de rabia, con
terribles bramidos, prometiendo vengarse. Las aguas inmediatamente volvieron a sus niveles
normales.
Cuentan los cronistas que después de ese episodio los mapuches
celebraron nguillatunes e incluso habrían sacrificado un niño para ofrendarlo, descuartizado, al
dios de las aguas.

TERREMOTO DE 1822
El 19 de Noviembre de 1822, pasadas las diez de la noche, la fuerza de la tierra se abatió
sobre Chile entre Illapel y Chiloé. Ya dos semanas antes un fuerte sismo había alertado a la
población de Copiapó. Pero esta vez fue más intenso, cobrando no menos de doscientas
víctimas fatales y otros tantos heridos. Duró tres minutos y medio, pero registró unas 170
réplicas menores en los días subsiguientes.

El primero tiene relación con el supuesto avistamiento de un enorme meteorito que


habría cruzado los cielos de Valparaíso y Quillota desde la cordillera al mar la madrugada del
día veinte, presenciado por numerosos testigos que pernoctaban a la intemperie
atemorizados.
El segundo hecho relevante es la afortunada escapada del Director Supremo don Bernardo
O'Higgins de morir aplastado por los escombros del Palacio de Gobierno de Valparaíso, donde
se encontraba esa noche, siendo sacado a rastras por el ayuda de campo al momento en que
todo el edificio se derrumbaba.
El tercero es la ocurrencia de una marejada que destruyó la bahía de Quintero,
inhabilitándolo como puerto por largo tiempo.
Por último, y debido a las numerosas manifestaciones de fe observadas en muchos
devotos, quienes llegaban a practicar las más sangrientas penitencias imaginadas, se inició un
prolongado debate a través de la prensa de la época entre fray Camilo Henríquez, y el cura

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dominico fray Tadeo Silva. El primero, citando bases científicas que mencionaban a los
"sospechosos" racionalistas Voltaire, Rousseau y Montesquieu, reprobó moderadamente la
actitud de tales creyentes apelando al origen natural de fenómeno, para el cual consideraba
innecesario brindar tan repugnante espectáculo. El dominico consideró los planteamientos de
Henríquez impíos y blasfemos, poniendo incluso en duda las creencias religiosas del
adelantado fray Camilo. Intelectuales, autoridades y otros representantes de la sociedad
santiaguina se involucraron también en el debate, que se prolongó por varios meses.

TERREMOTO DE CONCEPCIÓN 1835

Ruinas de la Catedral de Concepción

A las 11.30 AM del día 20 de Febrero de 1835, un espantoso terremoto asoló la zona de
Concepción, la misma que un siglo más tarde se vería de nuevo en ruinas por similar desastre.
El Intendente interino de Concepción, coronel Ramón Boza, informaba al gobierno el
mismo día de la catástrofe:
"Un terremoto tremendo ha concluido con esta población. No hay un templo, una casa
pública, una particular, un solo cuarto; todo ha concluido: la ruina es completa. El horror ha
sido espantoso. No hay esperanzas en Concepción. Las familias andas errantes i fujitivas; no
hay albergue segura que las esconda; todo, todo ha concluido; nuestro siglo no ha visto una
ruina tan excesiva i tan completa"
El terremoto arruinó una ancha faja de 300 leguas comprendidas entre los ríos
Cachapoal y Valdivia. Concepción y Chillán quedaron en el suelo. Primero se oyó un estrépito
formidable, seguido de sucesivas sacudidas de la tierra, de sur a norte, en forma de olas
marinas, que impedían a los aterrados pobladores mantenerse en pie.
Al ruido ensordecedor del terremoto se sumó el del derrumbe de los edificios,
desencajados desde los cimientos. Una nube de polvo, que tornaba casi imposible la
respiración, envolvió los montones de escombros a que se habían reducido las ciudades. Cada
nueva sacudida era acompañada de estampidos, que hacían la impresión de que un volcán
había reventado bajo la ciudad.
En varios lugares, el suelo se dividió en grietas profundas. En Coyanco, departamento de
Puchacay, se hundió una pequeña colina y en su lugar quedó un profundo barranco. En el patio
de la casa de Mr. Evans, en Talcahuano, "reventó el suelo, vertiendo un agua hedionda y
sulfurosa, y el mismo fenómeno se observó en varios lugares vecinos a Concepción".
En medio de la bahía de San Vicente se elevó una columna semejante al chorro de una
inmensa ballena y al desaparecer dejó un gran remolino, como si el mar se entrase en una
cavidad de la tierra. Más allá de la isla Quiriquina se alzó una columna de humo semejante a
una torre.
Un maremoto de enormes proporciones arrasó las costas desde Constitución hasta el
extremo sur. En la desembocadura del Maule, represó el caudal del río hasta cuatro varas de
alto y al recobrar el nivel normal, arrasó la barra de arena que cierra el estuario. En Talcahuano

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el agua subió hasta 30 pies, arrasó la población y se retiró en seguida hasta dejar los buques en
seco, para venir de nuevo, durante varias horas
Se recogieron 34 cadáveres, desaparecieron 30 personas, se hospitalizaron 10 heridos
graves y el número de heridos leves y contusos se calculó en 500.
Concepción, Chillán, Yumbel, Rere, Los Angeles, La Florida, Coelemu, Talcahuano,
Penco, Tomé, Arauco y Colcura eran hacinamientos de ruinas.
En los puertos, las marejadas barrieron con los restos de las edificaciones.
El fenómeno telúrico había sido precedido de un aumento de la actividad volcánica de la
zona: Charles Darwin, quien estaba a bordo del "Beagle" frente a las actuales costas de
Valdivia, observó hilos delgados de lava ardiente que se deslizaban por los flancos del volcán
Osorno. Cuando llegó a Talcahuano, trece días después del sismo, refiere en su diario que en
este puerto las olas del mar lanzaron un cañón de cuatro toneladas cinco metros afuera de las
fortificaciones.

Isla Juan Fernández

En la isla Juan Fernández se observó con terror la aparición de una columna de humo
que surgía del mar a poca distancia del lugar llamado La Punta del Bacalao, según comunicó su
gobernador Sutcliffe.

Habitantes de Juan Fernández huyendo de las marejadas

El origen volcánico del fenómeno dio lugar a la creencia popular, que perduró más de
medio siglo, de que algunos indios expulsados de Talcahuano, en venganza, habían tapado el
cráter del volcán Antuco, con el perverso objetivo de que reventara por aquel puerto. En las

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tradiciones del siglo XIX la catástrofe figura con el nombre de "la ruina" en Concepción y
Chillán y del "temblor grande" en el resto de la zona afectada.

Cráter del volcán Antuco (dibujo de C. Gay)

En toda la zona que abarcó el terremoto, entre Chillán y Concepción, se recogieron


unos 120 cadáveres. Se desconoce el número de los que quedaron para siempre atrapados
bajo los escombros, fueron carbonizados por los numerosos incendios o fueron arrastrados
por las olas del mar en los puertos. Si bien es muy difícil determinar el número de víctimas, él
fue, desde luego, bajo, por la escasa densidad poblacional y por la hora en que se produjo.
Prosiguieron al terremoto grandes temporales, que malograron las cosechas que aún
estaban en las eras, agravando la situación de los pobladores que estaban guarecidos en las
quebradas y bajo los árboles.­

TERREMOTO EN CHILOÉ 1919

TERREMOTO DE TALCA 1928


El 1 de Diciembre, poco después de la medianoche, le tocó el turno a la zona del Valle del
Maule. Los mayores daños fueron entre Talca y Constitución, con 300 muertos y casi un millar
de heridos.
Muchas de las víctimas (55) fueron causadas por el derrumbe del tranque Barahona, cuyo
muro, formado por los relaves del mineral de cobre El Teniente, cedió arrastrando 314.000
metros cúbicos de agua y 4 millones de toneladas de material sólido, los que arrasaron la
pequeña estación Barahona.
En Talca fueron destruidas 3/4 partes de las viviendas y hubo 108 víctimas fatales.
Pelequén, Curicó, Curepto, Constitución, San Javier, Linares, Parral, Cauquenes y Chillán
presentaron pérdida de vidas, así como importantes daños en las construcciones.

TERREMOTO DE CHILLAN 24 de Enero de 1939

Chillán ha sido golpeado múltiples veces por terremotos de magnitud considerable (1751,
1835, 1939, 1953 y 1960), pero es el de 1939 el que marcó un hito en la historia de esa ciudad
("Ciudad del Movimiento", fue apodada), debido a los asoladores efectos que prácticamente no
dejaron piedra sobre piedra.

39
A las 23,32 hrs. del 24 de Enero de 1939 la tierra asestó un zarpazo a las provincias de
Maule, Linares, Ñuble y Concepción (aunque la tierra se movió entre Santiago y Temuco, y
entre la costa y Mendoza) llevándose consigo 5.648 vidas, según el informe oficial, y más de
30.000, según estimaciones de la prensa.
El presidente de la época, don Pedro Aguirre Cerda, se trasladó al día siguiente hacia la
zona afectada advertido de lo grave de la situación, aunque los primeros informes no
precisaban la zona del epicentro (inicialmente, al perderse totalmente las comunicaciones
con Chillán, se creyó que el mayor daño estaba en Concepción).
El movimiento se inició con una sacudida brusca y violenta, que derribó la mayoría de
los edificios, seguida de varias otras menores, que destruyeron totalmente la mitad de las
3.526 viviendas existentes entonces en Chillán. Todas las comunicaciones se cortaron.
Adobes, ladrillos y vigas aplastaron miles de personas, algunas de las cuales fueron
rescatadas en los días siguientes por voluntarios y marinos de los destructores Riquelme y
Serrano, el acorazado Almirante Latorre y las naves británicas Ajax y Exeter y el buque
francés Jeanne D'Arc. La Fuerza Aérea, LAN, Panagra, Ferrocarriles del Estado y muchos
otros se sumaron al rescate.
Parral, San Carlos, Florida, Bulnes, Quellón, Coelemu, Rafael, Penco, Tomé y
Concepción sufrieron daños considerables en sus construcciones.

El sismo fue catalogado como magnitud 7,8 en escala Richter e intensidad X en escala
Mercalli.

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VALDIVIA 21-22 DE MAYO 1960
Recordando los antecedentes del fenómeno experimentado a fines de mayo de 1960 podemos
destacar algunos puntos relevantes.
El sábado 21 de mayo de 1960, a las 6:02 A.M. (hora de Chile), la zona de la península de
Arauco fue sacudida por un sismo cuya magnitud fue de 7.75 grados en la escala de Richter.
Tuvo 19 epicentros, algunos de ellos en el mar. En Concepción, el Puente carretero sobre el Río
Bío­Bío, de casi 2 Km. de largo, fue cortado en un gran trecho, impidiendo la comunicación con
las ciudades costeras del Golfo de Arauco (similitudes con sismo de febrero de 2010). A las
14:55 horas del día 22 de mayo de 1960 (un día después) se registró un sismo con una
intensidad de 9.5 en la escala de Richter con 37 epicentros que se sintió con más intensidad en
la ciudad de Valdivia. Los 37 epicentros se repartían en sentido norte­sur entre Puerto
Saavedra y Chiloé y en sentido este­oeste en puntos de la cordillera y la costa oceánica,
abracando una superficie aproximada de 400.000 km2. Abarcó 13 provincias chilenas y 3
provincias argentinas. En territorio chileno provocó alrededor de 10.000 muertos. En la zona
de Villa La Angostura tuvo efectos de gran intensidad y en la zona de San Carlos de Bariloche
provocó que una porción de la costa lacustre en la cual se encontraba el puerto se cortara
desplomándose a las profundidades del lago. En la zona de lago Correntoso, provocó el
desprendimiento de un pequeño trozo de costa de la margen noreste que se hundió en las
aguas según relatan los habitantes del lugar. Treinta y seis horas después de este evento
sísmico entraron en emisión unos 10 centros de eruptivos destacándose por su magnitud e
intensidad el Complejo Volcánico Puyehue Cordón Caulle (actualmente en erupción).

Imagen del CVPCC al momento de la explosión inicial en mayo de 1960.­

41
En las imágenes satelitales del CVPCC capturadas durante el actual proceso eruptivo se ha
identificado claramente en los laboratorios de la NASA y USGS el centro de emisión del evento
correspondiente al año 1960 y el campo de lava generado, no ha mucha distancia del actual
centro de emisión del sistema fisural.

Abajo, esquema del complejo volcánico

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43
DESCRIPCIÓN DE LA CATÁSTROFE
La triple catástrofe de 21 y 22 de mayo de 1960 ­ dos terremotos y un maremoto que
asolaron trece de las entonces 25 provincias del país, dejaron una profunda huella en el espíritu

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de la población y deterioraron gravemente la economía de la nación. En pocos minutos se
perdieron centenares de vidas y fue arrasada la infraestructura chilena, parte del territorio se
hundió en el mar, aparecieron nuevas islas y otras fueron borradas por el tsunami. Tres
derrumbes de tierra bloquearon el desagüe natural del Lago Riñihue hacia el Río San Pedro
amenazando con asolar los pueblos ribereños y la parte baja de Valdivia. En dos meses un
contingente encabezado por el Ingeniero Raúl Sáez Sáez logró evitar la tragedia.
A las seis de la madrugada con dos minutos del 21 de mayo, gran parte del país, desde el
Norte Chico hasta Llanquihue, fue despertado por un brusco movimiento sísmico. Las
comunicaciones de Santiago al sur quedaron abruptamente interrumpidas. Los primeros
boletines se conocieron a través del periodista Enrique Folch (conocido como "El Repórter X"),
quien a través de Radio del Pacífico informó sobre comunicaciones captadas de
radioaficionados de Coronel, Chillán, Concepción, Angol, Talcahuano y otros pueblos del sur
chileno, relativas al desastre. El presidente Jorge Alessandri, quien había hecho ya un estreno
catastrófico el día de su elección al registrarse el Terremoto de las Melosas en 1958, debió
suspender el tradicional Mensaje ante el Congreso así como las celebraciones del Combate
Naval de Iquique de 1879 preparados para ese día. Además llovió intensamente toda esa
jornada en el sur de Chile.
Cuando ya se había iniciado una cadena de información y solidaridad, en una relativa
calma, el día domingo 22 de mayo a las tres de la tarde con diez minutos un nuevo y más
intenso terremoto se dejó sentir en la zona sur, especialmente en Valdivia.

Estrictamente hablando, en Chile hubo 9 terremotos entre el 21 de Mayo y el 6 de Junio de


1960
(informe del subdirector del Instituto de Sismología de la Universidad de Chile Edgar Kausel):
Magnitud
Epicentro Fecha y Hora
Richter*
Mayo 21 06,02
1 Concepción y Lebu 7.25
horas
Mayo 21 06,33
2 Concepción 7.25
horas
Mayo 22 14,58
3 Concepción 7.5
horas
Mayo 22 15,10
4 Valdivia 7.5
horas
Mayo 22 15,40
5 Valdivia 8.75
horas
Mayo 25 04,37
6 Península de Taitao 7.0
horas
Isla Wellington (Puerto Mayo 26 09,56
7 7.0
Edén) horas
Junio 2 01,58
8 Península de Taitao 6.75
horas
Junio 6 01,55
9 Península de Taitao 7.0
horas

45
CIUDADES Y PUEBLOS MÁS AFECTADOS

De norte a sur, los primeros daños importantes fueron detectados en Talca, donde la
carretera longitudinal se hundió cerca de un metro en un tramo de 50 metros al norte del
cruce con el Río Maule.
En Constitución la Escuela Vocacional fue seriamente dañada, debiendo suspenderse las
clases.
En Parral hubo dos muertos y se derrumbó el edificio de la Policía de Investigaciones.
Quirihue y San Carlos resultaron con varias viviendas destruidas (Registro Civil y
Compañía de Teléfonos en este último).
Los retenes de Carabineros de Ñiquén y Tanilboro fueron destruidos.

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En Chillán murieron cinco personas y el 20 por ciento de sus edificios registró daños
considerables. Era el punto más austral del país que mantenía comunicaciones normales con
Santiago.
En Yungay pereció una persona y cayeron varios edificios.
En Tomé hubo 5 muertes y numerosas viviendas destruidas, tanto por el terremoto
como por el tsunami registrado el día 22 de mayo.
En Dichato hubo dos muertos y el barco pesquero Ube varó cerca de la playa.
En Talcahuano perecieron diez personas y se dañó gravemente el 65% de las viviendas
(había entonces un total de 13.000), quedando otro 25% en condiciones inhabitables. Horas de
terror se vivieron cuando la tarde del 22 se registró un tsunami que hizo subir el nivel de la
playa en tres metros, debiendo evacuarse la población Rocuant Morro. Los edificios de La
Aduana, el teatro, la Clínica Talcahuano, la Gobernación y varias casas comerciales debieron
ser, entre otros, posteriormente demolidos.
En Concepción se estimó en 125 los muertos y 300 los heridos. No hubo suministro
normal de agua potable durante cinco días, así como de servicios telegráficos, telefónicos y de
electricidad. Más de 2.000 viviendas resultaron destruidas, especialmente en la zona vecina a
Talcahuano, habitada por gente de menores recursos. El puente sobre el río Bio Bio se
destruyó en tres partes, especialmente en la zona aledaña a Concepción, donde se derrumbó
un tramo de 45 metros. Los edificios de los diarios La Patria y El Sur, así como de la Casa
Correccional Buen Pastor, convento de las Monjas Sacramentinas, Liceo de Niñas, etc.,
sufrieron daños y víctimas considerables. La vía férrea entre Concepción y San Rosendo se
interrumpió a la altura de Talcamávida. La usina de Huachipato estuvo a punto de sufrir daños
irreparables al suspenderse la energía eléctrica y comenzar a enfriarse la mezcla en su interior
(habrían tenido que dinamitarla).
En Lota hubo 18 muertos y 30 heridos. Los minerales de carbón fueron peligrosamente
inundados por los derrumbes en su interior.
Coronel registró tres muertos y destrucción del 50% de sus casas.
Los Angeles sufrió daños en el 70% de sus viviendas y en la mayoría de sus edificios
públicos. Curiosamente la mayoría de las fachadas permanecieron indemnes.
En Curanilahue hubo un fallecido.
En Lebu murieron nueve personas y hubo daños importantes, especialmente en la mina
La Victoria de Lebu.
En Angol se dañó el 82% de las viviendas y 6.000 personas perdieron sus hogares. Hubo
tres muertos. La Escuela Normal, Liceo de Niñas, Casa Hogar e Instituto Comercial sufrieron
enormes daños. El cementerio prácticamente se derrumbó, dejando a la vista los esqueletos y
cadáveres de sus nichos (fui testigo directo del hecho). La Cárcel y la Intendencia fueron
también seriamente dañadas.
Los Sauces, Victoria, Traiguén y Collipulli sufrieron daños de considerable magnitud. En
esta última localidad el Viaducto del Malleco fue dañado interrumpiéndose por varias semanas
el tránsito de trenes.
Carahue sufrió la destrucción del 40% de sus viviendas.
Temuco no registró víctimas fatales, pero si siete heridos y enormes daños en las
carreteras de acceso a Pucón y ciudades vecinas. Hubo interrupción de servicios eléctricos y de
comunicaciones por varios días.
El Lago Villarrica se desbordó inundando las casas aledañas a sus riberas.
El pequeño pueblito indígena Peihueco, al interior de la provincia de Cautín, fue
virtualmente sepultado por un alud de tierra registrándose la dramática muerte de 300 de sus
habitantes y desapareciendo otros 50.
Toltén, Puerto Saavedra y Queule, situados en zonas bajas en la costa de Cautín, no
registraron muchos daños por el terremoto mismo. El tsunami posterior, sin embargo, los
asoló sin piedad. Puerto Saavedra fue borrada de la faz de la tierra. Sus casas fueron
arrastradas por el mar más de dos kilómetros tierra adentro. Sólo una casa resistió la

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embestida. Su población, a la sazón de 2.500 habitantes, alcanzó a correr hacia tierras altas,
alertada por la sirena de bomberos, que aulló incesantemente, huyendo de tres olas gigantes
sucesivas que destruyeron todo a su paso. Cincuenta de ellos, sin embargo, perecieron en el
lugar. Toltén y Queule no corrieron mejor suerte y también fueron asoladas por las olas.
Valdivia, sitio del epicentro, quedó a oscuras. Se reportaron quince muertos y cien
heridos. El 40% de las casas fue destruído. El desborde del Río Calle Calle inundó centenares
de casas y el centro comercial quedó parcialmente destruido. La Isla Teja y los barrios Collico y
Las Animas debieron ser evacuados. La avenida Costanera fue anegada por el río y casi todos
los puentes resultaron inutilizables. La torre del Cuerpo de Bomberos y el Hospital de la ciudad
quedaron también inoperables. Alrededor de 20.000 personas perdieron su hogar.
Otro pueblo que sufrió las graves consecuencias del maremoto fue Corral, donde
lamentablemente sus habitantes no alcanzaron a ponerse a salvo y fueron llevados por el mar
junto a sus casas y animales. Poblaciones completas, como la de pescadores de la Caleta San
Carlos, fueron arrasadas por las olas registrándose centenares de muertos y desaparecidos. En
esta zona, que es una bahía en la cual desemboca el río Valdivia en el océano Pacífico, varias
naves se encontraban fondeadas en sus puertos. Entre éstas estaban el barco "Carlos
Haverbeck", el vapor de pasajeros "Prat", los remolcadores "Pacífico" y "Chanchorro", "El
Canelo", el vapor "Santiago" y el buque de dragado "Covadonga". Los cuatro primeros se
hundieron. "El Canelo" varó en un brazo del río Valdivia y el "Santiago" lo hizo frente a Niebla.
La "Covadonga" arrasó una escuela y varias casas y quedó en el río Putimay. Un voluntario del
Cuerpo de Bomberos de Corral, que estaba haciendo sonar la sirena para advertir a la
población del maremoto que se avecinaba, fue arrastrado mar adentro aferrado a una tabla,
logrando ser rescatado al día siguiente a varios kilómetros del lugar.
Lauris Sterns informó que ella fue testigo presencial y señala que la Isla Teja no quedó
totalmente aislada, que la torre del Cuerpo de Bomberos resultó destruida, que lo que hacían
sonar era una campana y no una sirena y que los puentes quedaron inoperables por vehículos,
pero se podía transitar a pie. Señala además que un remolcador (no recordaban su nombre los
testigos), en Corral fue levantado por la ola del maremoto y depositado, tierra adentro, detrás
de los edificios de los Altos Hornos, una refinería de acero en Corral.
Los Morros, San Carlos, Amargos, Camino Amargos, Corral Bajo, La Aguada, San Juan,
Ensenada, Niebla y Los Molinos prácticamente desaparecieron. En Mehuín sólo una casa
resistió el embate, pero treinta de sus habitantes murieron o desaparecieron.
En La Unión hubo un herido y un desaparecido. Uno de sus molinos se derrumbó, al
igual que la Municipalidad, maestranza, tiendas y bodegas de frutos.
Osorno sufrió la destrucción de cincuenta casas y hubo ocho muertes, muchos de ellos niños
que asistían a la función de la tarde del teatro de la ciudad. Su Catedral, Iglesia Alemana y
Banco del Estado fueron seriamente dañados. Bahía Mansa, Pucatrihue, Maicolpué y Choro
Traiguén prácticamente desaparecieron.
Río Negro y Purranque debieron lamentar la destrucción de sus principales edificios
(molinos, hospital, hoteles y varias tiendas y casas).
Frutillar, Llanquihue y Puerto Varas sufrieron pocos daños con el terremoto, aunque en
esta última hubo ocho muertos. Peulla lamentó dieciocho víctimas fatales y grandes daños.
Los caminos de acceso se interrumpieron en varios puntos.
En Puerto Montt se registraron treinta muertos y ciento treinta heridos. El 90% de sus
viviendas fueron destruidas ya sea por el terremoto, los incendios posteriores (como fue el
caso de la Comisaría) o por el tsunami (edificios portuarios, aduana y viviendas costeras). El
muelle de la caleta Angelmó desapareció al igual que gran parte de su recién inaugurada
población Modelo.
Ancud no corrió mejor suerte, sumándose a las calamidades mencionadas la acción de una
incesante lluvia. El “oleje” llegó hasta la Plaza de Armas y las poblaciones Pudeto, La Arena y El
Castillo fueron arrasadas. Muchos pescadores intentaron huir mar adentro en sus propios
botes o en la lancha de Carabineros "Gloria", pero fueron sorprendidos por el tsunami, el que

48
hundió la lancha con treinta personas a bordo, y alrededor de nueve botes con sus respectivas
familias.
Castro sufrió una suerte similar, con los edificios más antiguos arrasados por el terremoto
del 22 de mayo, su centro cívico consumido por los incendios subsecuentes y sus edificaciones
portuarias barridas por el maremoto.

El RIÑIHUE

Se ha denominado "epopeya" a esta hermosa y admirable gesta realizada por un grupo


de gente de la más diversa condición: obreros, militares, profesionales, campesinos, etc.,
quienes, unidos por una amenaza común provocada por la acumulación de agua de la
desembocadura del Lago Riñihue debido a los deslizamientos de cerros por el terremoto,
veían con espanto la inminente tragedia que se originaría en los pueblos río San Juan abajo, de
ceder repentinamente estas accidentales represas naturales ­ como era inevitable ­ y no
trepidaron en desafiar la desgracia en un operativo hasta hoy asombroso, trabajando contra el
tiempo y las malas condiciones climáticas hasta lograr su objetivo.
Un testigo presencial autorizado como el periodista Luis Hernández Parker es quien
puede relatar de mejor modo aquel glorioso episodio contra la adversidad:
“La primera vez que Pierre Lehman, de la CORFO, y Reinaldo Haernecker, de ENDESA,
conocieron las proporciones que tomaría la erupción acuática, se quedaron helados. El Riñihue
es un lago goloso que se alimenta de otros inmensos lagos de esa vasta hoya hidrográfica que
ni siquiera respeta la frontera con Argentina, pues le quita aguas también al lago Lácar.
Cuando su nivel aumenta en un metro, significa que tiene 200 millones de metros cúbicos
más; los que debe vaciar en el San Pedro y Calle­Calle, y de allí al río Valdivia. Como el tercer
cerro tiene una altura de 24 metros, significa que 4.800 millones de metros cúbicos pasarían
en una horripilante avalancha hacia el mar, arrastrando inmensos árboles, puentes de Malihue
y Antilhue, y los dos puentes de Valdivia. Todo esto descendería como una tromba levantando
en vilo las casas, aserraderos, haciendas e industrias que bordean estos ríos y la casi totalidad
del radio urbano quedaría anegado y en parte llevado al mar. Esta vez fue explicable el discreto
silencio sobre las consecuencias de un rebase de cuatro mil 800 millones de metros cúbicos. El
sismo igualó a las clases sociales.

Suma de esfuerzos

La lucha contra el lago une inteligencia con la constancia y el sacrificio; el cálculo


apresurado y febril del ingeniero, del fotógrafo, del especialista en suelos y del mecánico;
desde la acción de la FACH hasta el humilde obrero que duerme a la intemperie y que ni
siquiera pueden cantar cuando se asoma la cara grande de la luna. Sólo hay tiempo para
combatir y el combate consiste, en síntesis, en lo siguiente:
•Si se hubiera dejado que las aguas crecieran sin control, el nivel del Riñihue habría
llegado a la cima del tercer taco; a 24 metros de altura, o sea, 4 mil 800 millones de metros
cúbicos se habrían abalanzado hacia el mar sin respetar nada.
•En las crecidas normales del invierno el rebase del Riñihue es de 400 metros cúbicos por
segundo; el rebase anormal, de no intervenir el hombre para abrirle un canal en la garganta
asfixiada, habría sido de 3 mil metros cúbicos por segundo al principio y luego de cantidades
imposibles de calcular al disolverse el tercer taco.
•El rebase se habría realizado en cinco horas. En cinco horas se habrían vaciado 4.800
millones de metros cúbicos, es decir, la inundación casi total de Valdivia y la destrucción de los
pueblos ribereños.
•La epopeya del Riñihue consiste en impedir esta erupción violenta del "volcán" Riñihue,
para lo cual se realizan dos obras simultáneas: se le abren canales en su desagüe del San
Pedro, y se tapan las bocas por donde se alimenta el lago.

49
•Mientras 27 tractores bulldozer trabajan en el tercer taco que contiene las aguas para
romper ladera que baje la cima de 24 a 15 metros (lo que significa que se deben vaciar 3 mil
millones de metros cúbicos), al mismo tiempo se tapan los accesos en el río Enco que entrega
las aguas del Panguipulli, y obras similares se realizan en el Calafquén y en el río Llanquihue
que conduce las aguas de los lagos Neltume y Pirihueico. Al mismo tiempo, en el Enco se
lanzaron hasta hoy (lunes) 35 mil sacos de cemento para "tapiarlo" y tres bombarderos de
Cerro Moreno, de Antofagasta, al mando del capitán de bandada Silva, se preparan para
dinamitar un roquerío en el San Pedro, para construir una represa que ayude a contener las
aguas del Riñihue.
•En aquellos recodos angostos del San Pedro también se pondrán cargas de dinamita o se
bombarderán desde el aire. Enormes rastrillos están listos para enderezar los árboles que se
crucen en el río y que hagan tacos".
•En Valdivia y en las riberas, la población sabe cuándo debe evacuar, 24 horas después de
la señal de alarma, y que no será antes del 23, según me lo dijo desde Santiago, Humberto Díaz
Contreras, gerente de la CORFO. Toda esta gigantesca obra del hombre, contra el Riñihue, no
se realiza para que se cante o se obtenga un premio en literatura. Se quiere y se tiene la
certeza de que el rebase será controlado. No será enloquecido ni vertiginoso como lo desea el
agua, sino con cierta pausa domeñada. Así esperan los técnicos que el desagüe se verifique a
razón de mil doscientos metros cúbicos por segundo, y que el lago evacuará su exceso en un
mínimo de 48 horas y hasta de cinco días con buena suerte. Las medidas se tomaron y sólo
faltaba esperar, navegando en la zozobra.
Afortunadamente, el éxito coronó tan magnífico esfuerzo y muchas vidas fueron salvadas.

Camino Osorno-Argentina

Castro

50
MEMORIA TÉNCICA DEL FENÓMENO

El 21 de Mayo de 1960 a las 6:02:52 A.M. tiempo local, un fuerte temblor de foco superficial
sacudió a la zona central del país. Su epicentro (latitud 37.5ºS y longitud 73.5ºW) se ubica
cerca de Concepción, La magnitud fue de 7.5 de la Escala de Richter y su intensidad en
Concepción se puede estimar como de VIII a IX en la Escala Modificada de Mercalli.
Era sólo el comienzo de la actividad sísmica más intensa que haya
experimentado Chile en épocas modernas, antes del sismo del 27 de febrero de 2010.
En este mismo día y al día siguiente se sucedieron numerosas réplicas
alcanzando las más fuertes las magnitudes de 6.5, 7.5, 7.8 y 7.5 respectivamente.
El domingo 22 de Mayo a las 3:10:48 PM se produjo un terremoto de magnitud
7.5 con epicentro (42.0ºS 74.5W) cerca de Chiloé. Había sido precedido 15 minutos por un
temblor menor que había causado alarma en la población. Veintiocho segundos más tarde,
antes que cesara el movimiento del suelo, ocurrió un terremoto de considerable mayor
importancia (9.5 (Mw). Sus características se ven obscurecidas por el temblor que
inmediatamente lo precedió. Su epicentro se ubica mar adentro (38S, 73.5W) 130 a 180 km. al
oeste de Valdivia y fue de foco superficial.
La máxima intensidad que razonablemente se puede asignar a este terremoto
es grado X en la ciudad de Valdivia. La perturbación tectónica que empezó cerca de
Concepción, progresó paralela a la costa hacia el Sur, como queda evidenciado por la
ubicación de los epicentros de muchas de las réplicas que llegan hasta latitudes 45ºS y 46ºS.
Se puede estimar por lo tanto, que hubo una liberación de energía acumulada a lo largo de
1.000 km de longitud.
Los terremotos ocasionaron espectaculares cambios de nivel. Un hundimiento tectónico
de más de 1.5 m ocurrió en la región de Valdivia, mientras que más al Norte la costa se
levantó más un metro. Se produjeron importantes deslizamientos y en algunas regiones fue
notable la consolidación del terreno y el asentamiento de suelos blandos. El lago Riñihue
obstruyó su desagüe por el deslizamiento de tres grandes masas de tierra, repitiéndose un
fenómeno que había acontecido en 1575, poniendo en peligro la ciudad de Valdivia ante la
eventual evacuación repentina de las aguas embalsadas.
Los ingenieros de ENDESA, Obras Públicas y CORFO dirigidos por el Ingeniero Raúl Sáez,
debieron realizar la obra de ingeniería de emergencia más grande efectuada en Chile: en dos
meses lograron abrir un canal de evacuación del lago, evitando la destrucción de una rica zona
agrícola, ganadera e industrial que tenía alrededor de cien mil habitantes.
Fue manifiesta la importancia de las propiedades de los suelos en el comportamiento
de las estructuras para resistir la solicitación sísmica. Se hizo evidente que muchos daños se
originaron por falla del terreno. Se produjeron asentamientos sustanciales en zapatas aisladas.
En puentes fue frecuente la rotación en cepas y pilastras, y en un gran número de casos
fallaron sus estribos y accesos por deslizamientos en las orillas. Se produjeron extensos
asentamientos en caminos y vías ferroviarias, en molos y muelles se ocasionaron importantes
daños, quedando en algunos casos completamente destruidos. La licuación del terreno
inducida por la acción sísmica fue la causa aparente de un número substancial de estas
dificultades.
El gran terremoto también generó un maremoto de efectos devastadores. El tsunami
empezó de 15 a 30 minutos después del terremoto y continuó por varias horas, alcanzando en
algunos lugares alturas de más de 6 m. y causando considerables daños en Chile, Islas Hawai y
Japón. El 24 de Mayo el volcán Complejo Volcánico Puyehue Cordón Caulle inició una erupción
que duró varias semanas. No hubo registros instrumentales de estos terremotos.

51
La distribución de intensidades para el gran terremoto del 22 de Mayo está caracterizada por
una estrecha y excepcionalmente larga faja de intensidad VIII que se extiende por más de 6º
de latitud, desde el N de Concepción hasta el S hasta la Isla de Chiloé. El cuadro general se
complica por el terremoto del 21 de mayo que determinó intensidades altas en el área de
Concepción. Por otra parte, la evaluación de daños en las ciudades costeras se hace difícil,
porque el maremoto borró una buena parte de la evidencia dejada por los daños puramente
atribuibles a los sismos. Según Martín Duke y David Leeds, las intensidades para distintas
localidades serían las de la tabla siguiente, en el entendido que en cada zona la intensidad no
ha sido uniforme siendo muy dependiente de las variaciones locales de la calidad del terreno.

Ciudad Intensidad Mercalli

Concepción VIII

Osorno VII ­ VIII

Pitrufquén VI

Río Bueno VII

Loncoche VI

Río Negro VIII ­ IX

Lanco VI

Purranque VII

Máfil V

Llanquihue VIII ­ IX

Temuco V

Totoral IX

Mariquina VI

Frutillar VIII

Cayumapu VIII

Alerce X

Valdivia X

Puerto Varas VII

Pelchuquín VII

Puerto Montt VIII ­ IX

52
Riñihue X

Ancud VII

La Unión VII

Se decía con anterioridad que no hubo registro instrumental de estos terremotos. Para
suplir esta falta de información se han realizado estudios tendientes a determinar la probable
aceleración producida, tomando en consideración los daños específicos observados..

La energía de un sismo se puede expresar en ergs. En la figura siguiente se compara la energía


liberada por terremotos con otros tipos de fenómenos y donde se puede apreciar la
importancia energética del gran terremoto de 1960.

Los grandes terremotos de Chile en Mayo 1960 han aportado otra primicia
mundial. En la ocasión, fue la primera vez en la historia que fue registrada la vibración de la
totalidad de la tierra, fenómeno ya predicho por Poisson en 1813. En efecto fueron
perceptibles los modos normales de vibrar: en torsión según el plano del ecuador y en
elongación y achatamiento de la distancia entre los polos. Para estos movimientos los
tiempos fueron respectivamente de 54 y 44 minutos. A partir de entonces se miden estos
períodos para los grandes terremotos, ya que tienen importancia para la comprensión del
interior de la tierra. Las medidas de 1960 confirmaron el modelo de estructura general ya
desarrollado e inferido de las trayectorias, espacio­tiempo, de las ondas P y S.
TERREMOTO DE REGIÓN DEL MAULE­CONCEPCIÓN febrero de 2010

El terremoto de Chile de 2010 fue un sismo ocurrido a las 03:34:14 hora local (UTC­3), del
sábado 27 de febrero de 2010, que alcanzó una magnitud de 8,8 MW.1 2 El epicentro se ubicó
en el Mar Chileno, frente a las localidades de Curanipe y Cobquecura,nota 1 cerca de 150
kilómetros al noroeste de Concepción y a 63 kilómetros al suroeste de Cauquenes, y a 30,1

53
kilómetros de profundidad bajo la corteza terrestre. El sismo, tuvo una duración de cerca de 2
minutos 45 segundos, al menos en Santiago. Fue percibido en gran parte del Cono Sur con
diversas intensidades, en lugares como Buenos Aires y São Paulo por el oriente.
Las zonas más afectadas por el terremoto fueron las regiones chilenas de Valparaíso,
Metropolitana de Santiago, O'Higgins, Maule, Biobío y La Araucanía, que acumulan más de 13
millones de habitantes, cerca del 80% de la población del país. En las regiones del Maule y del
Biobío, el terremoto alcanzó una intensidad de IX en la escala de Mercalli, arrasando con gran
parte de las ciudades como Constitución, Concepción, Cobquecura y el puerto de Talcahuano.
Además, el centro de Talca (considerado como su gran casco histórico) quedó destruido casi en
su totalidad. En las regiones de La Araucanía, O’Higgins y Metropolitana, el sismo alcanzó una
intensidad de VIII provocando importante destrucción en la capital, Santiago de Chile, en
Rancagua y en las localidades rurales. Las víctimas fatales llegaron a un total de 525 fallecidos.
Cerca de 500 mil viviendas están con daño severo y se estiman un total de 2 millones de
damnificados, en la peor tragedia natural vivida en Chile desde 1960. La presidenta Michelle
Bachelet declaró el “estado de excepción constitucional de catástrofe” en las regiones del
Maule y del Biobío.
Un fuerte tsunami impactó las costas chilenas como producto del terremoto, destruyendo
varias localidades ya devastadas por el impacto telúrico. Debido a un problema de
comunicación generado por el terremoto y confusiones por parte de los organismos
encargados de enviar la alarma de tsunami, no se alertó a la población acerca del evento que
ocurriría 35 minutos después del terremoto. El archipiélago de Juan Fernández, pese a no
sentir el sismo, fue impactado por las marejadas que arrasaron con su único poblado, San Juan
Bautista. El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico generó pocos minutos después del
terremoto una alerta de tsunami para el océano Pacífico, que se extendió posteriormente a 53
países ubicados a lo largo de gran parte de su cuenca, llegando a Perú, Ecuador, Colombia,
Panamá, Costa Rica, Nicaragua, la Antártida, Nueva Zelanda, la Polinesia Francesa y las costas
de Hawai.
El sismo es considerado como el segundo más fuerte en la historia del país y uno de los seis
más fuertes registrados por la humanidad. Sólo es superado a nivel nacional por el cataclismo
del terremoto de Valdivia de 1960, el de mayor intensidad registrado por el ser humano
mediante sismómetros. El sismo chileno fue 31 veces más fuerte y liberó cerca de 178 veces
más energía que el devastador terremoto de Haití ocurrido el mes anterior, y la energía
liberada es cercana a 100.000 bombas atómicas como la liberada en Hiroshima en 1945.
El terremoto ocurrió en el borde convergente entre la placa de Nazca y la placa Sudamericana.
En la región en que tuvo lugar el terremoto las placas convergen a un ritmo de unos 68
mm/año. El terremoto estuvo caracterizado por un mecanismo focal de falla inversa causado
por la subducción de la placa de Nazca por debajo de la Sudamericana.
Las costas de Chile tienen una historia de grandes terremotos originados por esta frontera de
placas, como el terremoto de Valdivia de 1960, el más fuerte de la historia entre los
registrados mediante sismógrafos, llegando a una magnitud de 9,5 en la escala sismológica de
magnitud de momento, conocida erróneamente como escala de Richter. Se estima que la zona
de falla que se desplazó en este terremoto tenía una longitud de 640 km de largo, y se
encontraba inmediatamente al norte del segmento de 960 km que dio origen al terremoto de
1960.
La zona afectada, entre las ciudades de Constitución y Concepción, aproximadamente entre los
35° y los 37° de latitud Sur, había sido considerada por los expertos como un sector de alta
probabilidad de ocurrencia de un sismo de gran magnitud. La zona era considerada una
“laguna sísmica” debido a la ausencia de un terremoto importante desde 1835, aún cuando la
frecuencia de éstos es cercana a los 60 años; en sectores aledaños, en tanto, la energía
acumulada por la subducción de las placas ya había sido liberada por el norte con el terremoto
de Santiago de 1985 y por el sur con el de Valdivia de 1960. La “laguna sísmica” generada en la

54
costa del centro­sur de Chile era similar a la situación del extremo norte de Chile y el “gran
terremoto” esperado en dicha zona por décadas.
Durante más de 170 años, la subducción de la placa de Nazca bajo la Sudamericana estuvo
retenida sin poder liberar la energía acumulada a través de un evento sísmico. Así, se acumuló
una diferencia de hasta 10 metros entre el desplazamiento esperado de las placas y el real.
Ante dicha situación, un grupo de sismólogos determinó en 2007 que un terremoto de
magnitud entre 8 y 8,5 debía ocurrir “en el futuro cercano”.
A las 03:34:14 hora local (UTC­3) se produjo el violento sismo. Según el Servicio Sismológico de
Chile, el hipocentro se ubicó a 30,1 km de profundidad bajo el océano Pacífico, en el punto
36°17ʹ23″S 73°14ʹ20″O, ubicado a 12,5 kilómetros de la costa chilena y a 17 kilómetros de la
localidad de Cobquecura, en la provincia de Ñuble de la VIII Región del Biobío; la magnitud fue
estimada en 8,8 según la escala sismológica de magnitud de momento. En tanto, el Servicio
Geológico de Estados Unidos (USGS) estimó que el sismo se originó en una localidad un poco
más al norte, ubicada en 35°50ʹ46″S 72°43ʹ08″O, a 8 kilómetros al poniente de Curanipe, en la
provincia de Cauquenes, VII Región del Maule, con una magnitud de 8,8 en la escala de
magnitud de momento. La USGS determinó que el hipocentro se ubicó a 35 kilómetros de
profundidad. Por otro lado, científicos determinaron que el primer desplazamiento del sismo
se originó entre las localidades de Trehuaco y Coelemu.
El terremoto produjo una redistribución de la masa terrestre. Según científicos de la NASA, se
produjo un cambio en la rotación del planeta haciendo el día más corto en 1,26 microsegundos
e inclinó el eje terrestre en 2,7 milisegundos de arco, equivalente a 8 centímetros. Estudios
que utilizaron sistemas de posicionamiento global calcularon que la ciudad de Concepción se
movió 3,04 m hacia el oeste producto del terremoto, mientras que en Santiago el
desplazamiento fue cercano a 27,7 cm; incluso, Buenos Aires se desplazó 4 cm al poniente, aún
cuando se ubica a más de 1.300 km de distancia del epicentro, y se registraron movimientos en
zonas tan alejadas como las islas Malvinas y la ciudad brasileña de Fortaleza.
En la VIII Región del Biobío y parte de la VII Región del Maule, el sismo fue percibido con
características de ruinoso, llegando a IX en la escala sismológica de Mercalli que mide la
intensidad de los eventos telúricos. En el sector norte del Maule se sintió con intensidad VIII,
calificada como "destructiva", al igual que en las regiones Metropolitana de Santiago, la VI de
O'Higgins, la IX de La Araucanía y la provincia de San Antonio en la V Región de Valparaíso. En
el resto del territorio continental de dicha región, se percibió con intensidad VII, al igual que en
la XIV Región de Los Ríos.
Casi inmediatamente después del terremoto, comenzaron a sucederse réplicas de distintas
intensidades localizadas en territorio chileno. En las 24 horas siguientes, ya se habían
producido más de un centenar de estas réplicas, algunas de ellas de gran intensidad, siendo la
más fuerte una ocurrida a menos de dos horas del suceso principal y que alcanzó una
magnitud de 6,9 grados. Otra de las réplicas más destacables fue la ocurrida a las 8:25 hora
local del domingo 28 que tuvo su epicentro en la costa de la VI Región de O'Higgins y que se
dejó sentir desde Valparaíso hasta Concepción, alcanzando los 6,2 grados de magnitud. Como
consecuencia de estas réplicas, muchas de las casas que habían quedado dañadas por el
terremoto principal colapsaron definitivamente.21 Una nueva réplica de magnitud superior a
6, ocurrida el día 3 de marzo, generó conmoción en la población en conjunto con una falsa
alerta de tsunami; a esa fecha, ya se llevaban contabilizadas 203 réplicas que superaban los 4,9
grados de magnitud.
Debido la localización submarina del epicentro y su proximidad con la costa, gran parte de los
estragos fueron ocasionados por el tsunami asociado al movimiento sísmico sobre las
localidades costeras. Esta masa de agua a gran velocidad azotó las costas chilenas en pocos
minutos, alcanzando las localidades costeras de las regiones del Maule y del Biobío. En
Constitución, la primera ola del maremoto llegó cerca de media hora luego del sismo principal,
que según testigos superó los ocho metros de altura, siendo seguida unos minutos después
por una segunda ola más fuerte de unos diez metros y finalmente una tercera, similar a la

55
primera. El mar ingresó a localidades como Pelluhue y Curanipe, superando los 150 metros al
interior en Pichilemu, Iloca, Duao y hasta 200 metros en Coi Coi. En el puerto de Talcahuano,
olas de hasta 5 metros penetraron en el casco de la ciudad y el nivel del mar se elevó por sobre
los 2,4 metros.65 El puerto de Valparaíso enfrentó un alza de 1,7 metros en el nivel oceánico.
En Argentina se produjeron algunas réplicas del sismo chileno. Fueron particularmente
intensos los temblores que se registraron en las provincias de Salta, donde se registraron dos
fallecimientos como consecuencia de los temblores, San Juan y Mendoza, donde alcanzó alta
intensidad. También se registraron temblores de menor magnitud en las provincias de
Neuquén, Río Negro, Chubut, Córdoba, La Pampa,51 y en Buenos Aires.
El carácter de "réplica" del sismo registrado en Salta, sin embargo, fue puesto en duda debido
a sus características geológicas, diferentes a la del terremoto de Cobquecura. Un hecho similar
ocurrió con un sismo de 6,3 grados de magnitud, registrado el día 4 de marzo a 65 kilómetros
de la ciudad chilena de Calama en la II Región de Antofagasta. La proximidad de ambos
epicentros (397 kilómetros) y la gran distancia relativa de ambos respecto del sismo principal
(más de 1.400 kilómetros) sugiere la existencia de un foco sísmico independiente en la zona,
aunque la gran diferencia en la profundidad de ambos eventos telúricos (105,1 km para el de
Calama y 9,5 km para el de Salta) nuevamente relativiza esa relación.
En tanto, el Observatorio Vulcanológico de los Andes del Sur detectó un comportamiento
anómalo en algunos volcanes chilenos, el cual comenzó luego de producido el terremoto
principal. Ante esto, el OVDAS decretó alerta amarilla en el volcán Llaima y restricción de
ascenso al volcán Villarrica, como medidas precautorias.
El 11 de febrero de 2011, a solo 16 días de cumplirse un año del terremoto principal, se
registró un movimiento telúrico que alcanzó una magnitud preliminar de 7 en la escala de
magnitud de momento, pero que posteriormente fue corregido a 6,8 y cuyo epicentro se ubicó
a 45 kilómetros al norte de Concepción y a una profundidad de 18,4 kilómetros. De manera
preventiva, y de acuerdo a Radio Bío­Bío, los habitantes de Dichato fueron evacuados hacia
sectores altos del pueblo. Se registraron cortes de luz, colapso en líneas telefónicas y
atochamientos en la ciudad capital de la Región del Biobío donde, según los primeros reportes,
se sintió con mayor violencia el temblor. Se emitió una alerta preventiva de tsunami a la zona
costera de las regiones del Biobío, del Maule y de La Araucanía. Entre los días 11 y 13 de
febrero, se sintieron más de 50 sismos de moderada a alta intensidad en la VIII Región del
Biobío, destacando cuatro de estos sobre la magnitud 6,0. Además de otros leves sismos en el
mismo periodo en la IV y la V regiones.

Errores en el sistema de alerta

El Sismólogo de la Universidad de Hawái, Vindell Hsu, que trabaja para el Pacific Tsunami
Warning Center (Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico), fue quien llamó al SHOA para dar
la alerta del tsunami en las costas de Chile. En un comunicado dado a 3TV, señaló que lo
primero que se hizo fue enviar un mensaje de observación que es un mensaje oficial que indica
que ha ocurrido un terremoto y luego se envió una alerta de tsunami dirigida a muchos países
en el Océano Pacífico, incluyendo Chile. Quince minutos luego de ocurrido el sismo, se llamó al
SHOA inmediatamente para confirmar si la alerta de tsunami les había llegado. La persona de
turno que contestó el teléfono no dominaba el idioma inglés, y afirmó que sí habían recibido la
alerta, sin entender lo que se le había preguntado, causando un malentendido que se tradujo
en la nula coordinación de los sistemas de alerta nacionales, los cuales informaron que no
habría riesgo de tsunami, como se explicará en las líneas posteriores.
En su primera aparición pública tras el terremoto, la presidenta Michelle Bachelet descartó la
posibilidad de que se produjera un tsunami e hizo una llamada a que la población se
mantuviera tranquila. Estas declaraciones las habría realizado en base a un error en el
diagnóstico de la situación por parte de la Armada, más precisamente del Servicio Hidrográfico

56
y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA). Pocos minutos después del sismo, una gran
extensión de costa quedó devastada por olas de enormes dimensiones que se adentraron
varios centenares de metros tierra adentro arrasando con gran parte de las estructuras que
encontraban a su paso. La Armada ha reconocido su error al entregar información ambigua o
errónea a la Presidenta, sin embargo, el Comandante en Jefe de la Armada en una declaración
dada al diario El Mercurio de Valparaíso ha señalado que una hora antes de este informe
telefónico a la Presidenta, ya se había dado aviso a la ONEMI por parte del SHOA de la alerta
de tsunami. Dos días después de la catástrofe, la presidenta Bachelet señaló que el tsunami ha
causado más víctimas fatales que el mismo terremoto.
En tanto en Talcahuano, una de las zonas más afectadas por el maremoto, el exintendente
Jaime Tohá y el exgobernador de Concepción, Eric Aedo, entraron en contradicción con el Jefe
de Zona Naval, contraalmirante Roberto Machivello, respecto de quien entregó primero la
información donde se levantó erróneamente la alerta de tsunami.
Según declararon las autoridades civiles a Radio Bío­Bío, ellos sostuvieron una reunión
presencial durante la madrugada del 27 de febrero con el oficial de la Armada; mientras que el
Contraalmirante Machiavello sostiene que no se reunió con Tohá y Aedo hasta bien entrada la
mañana, versión que fue apoyada por la actual intendenta y entonces alcaldesa de
Concepción, Jacqueline Van Rysselberghe.
Queda claro ante la experiencia obtenida durante el actual proceso eruptivo del CVPCC que la
experiencia no ha sido suficientemente capitalizada.

REITERAMOS

La información que hemos referido no resulta un secreto, solo que de tratarse de un tema
que atrae a las actuales tareas técnico­científicas es de destacar la alta probabilidad de que
se estén registrando eventos asociados. Esta información base proviene de un parte oficial,
tarea investigativa y artículo científico del Dr. Stefano Lorito del Instituto Nacional de
Geofísica y Vulcanología de Italia quien lideró un grupo de investigación de universidades
estadounidenses y del organismo chileno. En ningún modo podemos descartar la
información y realizadas las consultas a los expertos regionales han ratificado la alta
probabilidad de ocurrencia del fenómeno.
En dicho informe se expresa que “el terremoto de magnitud 8.8 del 27 de febrero de 2010,
habría liberado sólo parcialmente las tensiones acumuladas en lo profundo de la corteza en
la región sur de Chile. Esta liberación de tensión corresponde a la acumulada desde el
terremoto de 1835. Según datos encontraron que la falla se desplazó hasta 19 metros a lo
largo de un segmento cercano a la ciudad de Constitución, y hasta unos 10 metros en un
segmento hacia el sur coincidente con un epicentro del terremoto de 1960. (…) Resulta
preocupante que en el sector central de la falla sólo se haya desplazado 5 metros ya que ello
lleva a una acumulación de tensión y energía. El terremoto del Maule provocó un aumento
de la tensión en latitudes próximas a los 37° S, siendo fuente de nuevos terremotos de
intensidad entre 8.8 y 9.5.” Esto lo anunció igualmente el Departamento de Sismología de la
Universidad de Chile. El evento eruptivo del CVPCC es uno de los eventos asociados al
fenómeno geológico descrito.

57
Cuernos del Diablo

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­021
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
1862 6.109
de
m metros
elevación:
41.40 41 °
Latitud:
°S 24ʹ0 "S
72.00 72 ° 0ʹ0
Longitud:
° W "W

Cuernos del Diablo es un estratovolcán basáltico de 1862 metros de altura


parcialmente erosionado por glaciares. Numerosos conos piroclásticos y flujos
de lava basáltica asociados se formaron durante el Holoceno, principalmente en
el flanco SO y desde la cumbre hasta la base noroeste del volcán. Aunque no se
conocen erupciones históricas de los Cuernos del Diablo, algunos de estos
conos pueden haberse formado durante el tiempo histórico (González­Ferrán,
1995). Fumarolas se observaron en un cono del flanco en el año 1931.
Distancia a Villa La Angostura: 82,19 km.

58
Cayutué-La viguería

País: Chile
Subregión
El sur de Chile
Nombre:
Volcán
1508­012
Número:
Volcán Conos
Tipo: piroclásticos
Volcán
Tephrochronology
Estado:
Última
erupción 1050 aC (?)
conocida:
Cumbre
1.660
de 506 m
metros
elevación:
41.25 ° 41 ° 15ʹ0
Latitud:
S* "S
72.27 ° 72 ° 16ʹ0
Longitud:
W "W

El Cayutué­La viguería es un campo volcánico que está formado por unos 20


lagos volcánicos basálticos y conos de ceniza del Holoceno en una alineación
NNE­SSO. El campo volcánico ocupa un área baja que se extiende entre el
extremo sur de Ensenada Cayutué, la extensión sur del Lago Todos los Santos, y
el extremo norte del Estuario de Reloncaví, donde el Río Petrohué, que drena el
lago Todos los Santos, llega al mar . El campo volcánico se encuentra a lo largo de
las principales tendencias regionales NS­zona de la falla Liquiñe­Ofqui. El volcán
La Viguería y Cayutué son los conos principales. La formación de los conos de
lava de La Viguería y flujos asociados temporalmente contuvieron al Río
Petrohué hace aproximadamente 3000 años, formando un lago efímero que estaba
lleno de depósitos de los volcanes Calbuco y Osorno. Conos piroclásticos y flujos
de lava del Volcán Cayutué llenaron la Ensenada de la depresión de Cayutué, que
separa el lago Todos los Santos de la Bahía Ralún.
Distancia a Villa La Angostura: 81,06 km.

59
Puntiagudo-Cordón Cenizos

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1516 ­
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1850
conocida:
Cumbre
2493 8.179
de
m metros
elevación:
40 °
40.969
Latitud: 58ʹ10
°S
"S
72 °
72.264
Longitud: 15ʹ50
°W
"W

El Puntiagudo­Cordón Cenizos es una cadena volcánica que se encuentra entre el Lago


Rupanco y el Lago Todos Los Santos en la región de los lagos de Chile. El Volcán
Puntiagudo es un estratovolcán andesítico de finales del Pleistoceno, con un pico
prominente de 2.493 metros de altura que llegó a tener su aguda cumbre por los
resultados de la disección de los glaciares. Posee un sistema de fisuras de 18 km de
largo, con más de 40 centros de emisión de finales del Pleistoceno al Holoceno de conos
de escoria basáltica y estratovolcanes pequeños que se extiende hacia el NE. Los flujos
de lava de estos centros descienden al NO y SE, en algunos casos llegando a las costas
de los dos lagos, formando penínsulas de forma irregular. La única erupción histórica
se produjo en 1850, cuando se reportó caída de ceniza de la cadena de Cordón Cenizos.
Distancia a Villa La Angostura: 45,42 km.

60
Calbuco

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­1502 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1972
conocida:
Cumbre
2003 6.571
de
m metros
elevación:
41 °
41.326
Latitud: 19ʹ34
°S
"S
72 °
72.614
Longitud: 36ʹ52
°W
"W

Junto con su vecino Osorno, el Calbuco es uno de los volcanes más activos de los
Andes del sur de Chile. Este aislado volcán andesítico es de finales del Pleistoceno al
Holoceno y se eleva a 2.003 m al sur del Lago Llanquihue en la región de los lagos de
Chile. Guanahuca, Guenauca, Huanauca y Huanaque, son todos los nombres que
figuran como sinónimos de Calbuco, son en realidad sinónimos de cerca del volcán
Osorno (Moreno 1985, com. Pers.). El Calbuco de 2.003 metros de altura es alargado en
dirección SO­NE y está coronado por un cráter de 400 a 500 m de ancho en la
cumbre. La compleja evolución del Calbuco ha incluido el colapso del edificio en un
edificio intermedio durante el Pleistoceno tardío que produjo un 3 kilometros cúbicos
avalancha de escombros que llegó al lago. Una de las mayores erupciones históricas en
el sur de Chile se llevó a cabo a partir de la entrada en actividad del Calbuco en 1893­
1894 y concluyó con la construcción de un domo de lava. Erupciones posteriores han
ampliado el complejo de lava­domo en el cráter de la cumbre
Distancia a Villa La Angostura: 107,32 km.

61
Apagado

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­024
Número:
Volcán Cono
Tipo: piroclástico
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
1210 3.970
de
m metros
elevación:
41.88 41 °
Latitud:
°S 53ʹ0 "S
72 °
72.58
Longitud: 35ʹ0
°W
"W

Con un cono piroclástico con escasa vegetación, el Volcán Apagado, se encuentra en el


centro de la península entre el Golfo de Ancud y el Seno de Reloncaví. El volcán,
también conocido como Hualiaque, está situado al oeste del volcán Hornopirén y SO
del volcán Yate. El cono simétrico contiene un cráter en la cumbre en buen estado de
conservación. Una depresión de 6 km de ancho se abrió al SO, mencionado por
González­Ferrán (1995), y un pequeño flujo de lava de un segundo cono piroclástico
fluyó hacia el SO a través de una brecha en el lado suroeste de la depresión. Ello no es
prominente en imágenes de satélite. El Volcán Apagado se estima, de acuerdo con su
apariencia juvenil, que pertenece al Holoceno.
Distancia a Villa La Angostura: 151,29 km.

62
Yate

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­022
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
2187 7.175
de
m metros
elevación:
41 °
41.755
Latitud: 45ʹ17
°S
"S
72 °
72.396
Longitud: 23ʹ47
°W
"W

El volcán Yate es de finales del Pleistoceno, con glaciares y formación de basalto­


andesita, es un estratovolcán con ventilas del Holoceno parasitarias. Unos de estos
respiraderos del flanco se denominan Volcán Yate y Volcán Hornopirén en el
cuadrángulo 1:50,000. Poco se sabe de la historia geológica de este volcán aislado,
situado NNE del Volcán Hornopirén, al sur del estrecho Reloncaví, aunque los
estudios estratigráficos muestran evidencias de erupciones del Holoceno. El volcán
alargado contiene seis centros eruptivos localizados a lo largo de una fisura de
tendencia NO unos 7,5 km de largo. La actividad más reciente se originó a partir de la
formación de un cono de basalto­andesita en el noroeste y en los flancos
occidentales. No se conocen erupciones históricas del volcán Yate, aunque la
morfología de sus conos frescos sugiere una época histórica (González­Ferrán,
1995). Un deslizamiento de tierra volcánica no eruptiva en 1965 produjo un flujo de
escombros que llegó al Lago Cabrera, causando un tsunami que destruyó a un pueblo
y ha causado 27 muertes.
Distancia a Villa La Angostura: 129,62 km.

63
Hornopirén

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­023
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
1572 5.157
de
m metros
elevación:
41 °
41.874
Latitud: 52ʹ28
°S
"S
72 °
72.431
Longitud: 25ʹ53
°W
"W

El Volcán Hornopirén, está ubicado al SSW del volcán Yate. Es un joven volcán
formado morfológicamente por basalto­andesita, siendo un estratovolcán cubierto en
su mayoría de bosques. El volcán de 1.572 metros de altura, cuyo nombre significa
"horno de nieve", se encuentra a lo largo de una fosa tectónica definida por las
principales zonas regionales de Liquiñe­Ofqui, al norte del estrecho de Hornopirén e
inmediatamente al sur del Lago Cabrera. Los flujos de lava descienden destacados
más allá de la base SO del volcán y se superponen a la planta graben. El volcán se dice
que estuvo en erupción en 1835, aunque no se conocen detalles.
Distancia a Villa La Angostura: 142,35 km.

64
Cerro Pantojo

Chile /
País:
Argentina
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­152
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
2024 6.640
de
m metros
elevación:
40.77 40 °
Latitud:
°S 46ʹ0 "S
71 °
71.95
Longitud: 57ʹ0
°W
"W

El Cerro Pantojo es un volcán erosionado dominantemente basáltico de 2.024 metros de


altura del Pleistoceno a lo largo de la frontera entre Chile y Argentina con un cono de
cenizas del Holoceno en el lado argentino (Moreno 1985, com. Pers). Cerro Pantojo se
encuentra al sudoeste de lago Constancia, que se encuentra inmediatamente al oeste de
la frontera con Argentina, y tiene un espectacular y empinado pináculo por cumbre.
Distancia a Villa La Angostura: 29,77 km.

65
Osorno

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­1501 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1869
conocida:
Cumbre
2652 8.701
de
m metros
elevación:
41.10 41 °
Latitud:
°S 6ʹ0 "S
72 °
72.493
Longitud: 29ʹ35
°W
"W

La simetría del glaciar que cubre al volcán Osorno constituye un hito reconocido que se
eleva sobre los lagos Todos los Santos y Llanquihue. El Osorno fue construido hace
más o menos 250.000 años sobre un estratovolcán erosionado, La Picada, que tiene una
caldera de 6 km de ancho. La Picada Osorno en el NE sirve de base con maares
postglaciales y conos de escoria. Los 2.652 metros de altura dominantes de basalto­
andesita basáltica del Osorno hacen a uno de los volcanes más activos de los Andes
del sur de Chile. El volcán cónico contiene dos pequeñas cúpulas de lava dacítica en el
noroeste y en los flancos SSE. A partir de los conos de escoria y de los respiraderos del
flanco de fisuras, sobre todo en los lados oeste y SO, se han producido flujos de lava
que llegaron al Lago Llanquihue. Frecuentes erupciones explosivas incluidos flujos y
oleadas piroclásticas han ocurrido durante los últimos 14.000 años. Erupciones
históricas en Osorno tienen su origen en la cumbre y los respiraderos del flanco y se
han producido flujos de lava basáltica y andesítica que han entrado tanto en el Lago
Llanquihue como en el Lago Todos los Santos.
Distancia a Villa La Angostura: 85,97 km.

66
Monte Tronador

Chile /
País:
Argentina
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­011
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno?
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
3491 11.453
de
m pies
elevación:
41 °
41.157
Latitud: 9ʹ25
°S
"S
71 °
71.885
Longitud: 53ʹ5
°W
"W

El grupo volcánico Tronador ocupa ambos lados de la frontera entre Chile y Argentina
al este del pintoresco Lago Todos los Santos. La actividad se remonta a los principios
del Pleistoceno, y la parte más prominente del complejo es dominantemente basáltica a
andesítica. Cubierto de glaciares, el Monte volcán Tronador, se formó en tres etapas
durante el Pleistoceno medio. La actividad del Holoceno en el grupo de volcanes se
llevó a cabo al SSE de Monte Tronador, donde el cono de cenizas Fonck (también
conocido como Cerro Volcánico) cubre las rocas del grupo Steffen al E de Tronador. El
cono de buen estado de conservación era la fuente de un flujo de lava andesítica único
que es posterior al último ciclo glacial que se remonta a 70,000­14,000 años e infiere
que éste es de la última edad del Pleistoceno y Holoceno activas.
Distancia a Villa La Angostura: 52,48 km.

67
Cráter de basalto volcánico de campo

País: Argentina
Subregión Chile­
Nombre: S/Argentina
Volcán
1508­025
Número:
Volcán Conos de
Tipo: ceniza
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
1359 4.459
de
m metros
elevación:
42.02 42 °
Latitud:
° S * 1ʹ0 "S

70 °
70.18
Longitud: 11ʹ0
°W
"W

El campo de basalto volcánico de cráteres en la región norte de la Patagonia de


Argentina tiene una superficie de unos 700 kilómetros cuadrados. El campo volcánico
se encuentra a unos 400 kilómetros al este de la fosa Perú­Chile a lo largo de la amplia
región, con rumbo NO­SE se corresponde al sistema de Gastre . Nueve conos de ceniza
produjeron flujos de lava en bloques de composición basáltica alcalina, basanitic y
trachybasaltic. Una de las mayores características del campo volcánico es el Cerro
Fermín, un cono de ceniza que produjo una media docena de flujos de lava. La más
alta es un cono de 1359 m llamado Cerro Negro, donde los flujos de lava que alimentó
viajaron hacia el oeste, al este, y luego NE, donde se corta el margen distal por una
carretera provincial. Algunos de los flujos de lava, como los de Cerro Ventana y Cerro
Contreras, cubrieron en el Holoceno las costas de las playas de los lagos cercanos.
Distancia a Villa La Angostura: 200,03 km.­

68
Minchinmavida (o Minchinmahuida)

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­1504 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1835
conocida:
Cumbre
2404 7.887
de
m metros
elevación:
42 °
42.793
Latitud: 47ʹ35
°S
"S
72 °
72.439
Longitud: 26ʹ19
°W
"W

Un glaciar cubre al Volcán Minchinmávida, situado al oeste del Lago Riñihué; tiene
una cumbre en forma de silla con una alargada caldera de 3 km de ancho. El enorme
edificio es alargado en dirección NE­SO, y un centro eruptivo juvenil se encuentra en el
lado NE del complejo. Dos grandes erupciones explosivas durante el Holoceno
produjeron depósitos de tefra que se extienden hacia el este. Una erupción del
Minchinmavida fue reportada en 1742. Darwin observó el volcán en actividad en 1834
en su viaje de renombre que lo llevó a las Islas Galápagos. La última erupción conocida
del cono basáltico andesítico del Minchinmávida, entre febrero y marzo de 1835,
produjo un flujo de lava desde el cráter del flanco y lahares que alcanzaron la costa en
Punta Chana.
Distancia a Villa La Angostura: 242,56 km.

69
Chaitén

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­041
Número:
Volcán
Caldera
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 2010
conocida:
Cumbre
1122 3.681
de
m metros
elevación:
42 °
42.833
Latitud: 49ʹ58
°S
"S
72 °
72.646
Longitud: 38ʹ45
°W
"W

El Chaitén es un pequeña caldera con un domo de lava del Holoceno situado a 10 km


al NE de la ciudad de Chaitén en el golfo de Corcovado. Una oleada piroclástica y la
capa de piedra pómez que se consideran originarias de la erupción formó una caldera
elíptica de 2,5 x 4 kilometros de ancho en la cumbre y fue datada en unos 9400 años
atrás. Una cúpula riolítica, con lava de obsidiana de 962 metros de altura ocupa gran
parte del suelo de la caldera. Piedras de obsidiana de esta cúpula se encuentran en el
río Blanco y son la fuente de los artefactos prehistóricos de los sitios arqueológicos a lo
largo de la costa del Pacífico hasta 400 km de distancia desde el volcán hacia el norte y
el sur. La caldera está abierta en el lado SO por un río que desemboca en la bahía de
Chaitén, y el punto más alto en su borde meridional llega a 1.122 m. La primera
erupción histórica del volcán Chaitén en 2008 produjo gran actividad riolítica de
eventos explosivos y el crecimiento de un domo de lava que llenaron gran parte de la
caldera.
Distancia a Villa La Angostura: 252,37 km.

70
Huequi

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­1503 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1920 (?)
conocida:
Cumbre
1318 4.324
de
m metros
elevación:
42 °
42.377
Latitud: 22ʹ36
°S
"S
72 °
72.578
Longitud: 34ʹ41
°W
"W

El Volcán Huequi es un pequeño volcán en el centro de la península de Huequi en la


Bahía de Ancud. Un cono parásito se encuentra en el lado oeste de la cúpula de 1318­m
de basalto­andesita del volcán, que tiene un cráter de 800 m de ancho. Las erupciones
explosivas se registraron durante los siglos 19 y 20, inicialmente en 1890 y más
recientemente en 1920.
Distancia a Villa La Angostura: 203,30 km.

71
Yanteles

País: Chile
Subregión
El sur de Chile
Nombre:
Volcán
1508­050
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
erupción 6650 a. C. (?)
conocida:
Cumbre
2042 6.699
de
m metros
elevación:
43.50 43 ° 30ʹ0
Latitud:
°S "S
72.80 72 ° 48ʹ0
Longitud:
°W "W

Poco conocido, el volcán Yanteles en el sur de Chile se compone de cinco picos


cubiertos de glaciares a lo largo de 8 km de largo con rumbo NE en forma de
cresta. Varias capas de tefra del Holoceno han sido documentadas desde el volcán
Yanteles. La actividad histórica de este complejo volcánico andesítico de 2042 metros
de altura es incierta. Aunque no hubo informes de una erupción de Yanteles en el
momento del terremoto de chile del 20 de febrero de 1835, Sapper (1917) reportó que
las áreas negras cerca del cráter fueron vistas después del terremoto de 1835, la
naturaleza de esta actividad no está clara.
Distancia a Villa La Angostura: 352,32 km.

72
Corcovado

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­1505 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
4920 aC ± 100
erupción
años
conocida:
Cumbre
2300 7.546
de
m metros
elevación:
43.18 43 °
Latitud:
°S 11ʹ0 "S
72 °
72.80
Longitud: 48ʹ0
°W
"W

Poco se sabe de este volcán aislado que ha sido visto en erupción por Darwin. El
Corcovado, es probablemente de finales del Pleistoceno, está erosionado por glaciares
y rodeado de conos de ceniza del Holoceno. Existe una serie de lagos en el flanco
oriental del volcán basáltico andesítico. Erupciones en tiempos históricos fueron
consideradas probables (Moreno 1985). Darwin observó la actividad de la zona de
Corcovado en 1834, y una erupción que habría ocurrido en noviembre de 1835.
Distancia a Villa La Angostura: 290,19 km.

73
Puyehue-Cordón Caulle

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1515 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 2011
conocida:
Cumbre
2236 7.336
de
m metros
elevación:
40 °
40.590
Latitud: 35ʹ25
°S
"S
72.117 72 °
Longitud:
°W 7ʹ2 "W

El Puyehue­Cordón Caulle es un complejo volcánico (PCCVC) con orientación NO­SE


de finales del Pleistoceno al Holoceno de estructura basáltica­riolítica transversal a la
cadena volcánica SE de Lago Ranco. De 1.799 metros de altura, la Cordillera Nevada,
del Pleistoceno, posee la mayoría de las calderas en el extremo noroeste, separadas del
estratovolcán Puyehue, en el extremo SE de la gran fisura del complejo Cordón
Caulle. El volcán del Pleistoceno Mencheca, con conos de flanco del Holoceno se
encuentra NE de Puyehue. El volcán basáltico­riolítico Puyehue es el más diverso de la
geoquímica del CVPCC. La parte superior plana del volcán Puyehue de 2.236 metros
de altura fue construida encima de una caldera de 5 km de ancho y está coronado por
una caldera de la cumbre de 2,4 km de ancho de edad Holoceno. Los flujos de lava y
domos de composición riolítica en su mayoría se encuentran en el flanco oriental de
Puyehue. Erupciones históricas originalmente atribuidas a Puyehue, incluyendo
erupciones importantes en 1921­22 y 1960, ahora se saben que surgieron desde la zona
de ruptura fisural del Cordón Caulle. La zona geotérmica de Cordón Caulle, ocupa
una franje de 6 x 13 km de ancho siendo una depresión volcano­tectónica, y es el sitio
más grande y activo geotérmicamente de la zona volcánica de los Andes del Sur.
Distancia a Villa La Angostura Cordón Caulle (actual centro de emisión): 49,52 km.
Distancia a Villa La Angostura Puyehue: 46,73 km.
Distancia a Villa La Angostura sector central Cordón Nevado: 60,99 km.

74
Carran-Los Venados

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1514 =
Número:
Volcán Conos
Tipo: piroclásticos
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1979
conocida:
Cumbre
1114 3.655
de
m metros
elevación:
40.35 40 °
Latitud:
° S * 21ʹ0 "S
72.07 72 °
Longitud:
° W 4ʹ0 "W

El Carran­Los Venados es un grupo de volcanes que incluye un grupo de unos 50


conos de escoria, lagos volcánicos, y un estratovolcán pequeño que son ampliamente
alineados a lo largo de 17 kilómetros de largo ESE ENE­OSO tendencia de Lago Ranco
de estructuras basálticas a andesitas­basálticas, El grupo ocupa un volcán al norte en la
zona baja en la cual el punto más prominente topográficamente es la cadena Cordón
Caulle­Puyehue, y muchos de los centros de emisión son de la edad postglacial. El
Mirador, cono de escoria y dos lagos volcánicos, Riñinahue y Carranza, se formaron
durante las erupciones en el siglo 20. Estas erupciones históricas se concentraron en la
región de Liquiñe­Ofqui zona de falla de intersección con la alineación de las
chimeneas volcánicas
Distancia a Villa La Angostura: 55,76 km.

75
Grupo Antillanca

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­153
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
230 ± 200 años
erupción
aC
conocida:
Cumbre
1990 6.529
de
m metros
elevación:
40.771 40 °
Latitud:
°S 46ʹ15 "S
72.153 72 °
Longitud:
°W 9ʹ12 "W

El Grupo de Antillanca es un conjunto de fines del Pleistoceno al Holoceno de conos de


escoria basáltica andesítica, lagos volcánicos y estratovolcanes pequeños con una
superficie de 380 kilómetros cuadrados SE del Lago Puyehue y NE de Lago
Rupanco. El edificio más destacado es el pequeño estratovolcán del Holoceno
Casablanca de 1.990 metros de altura, que tiene un perfil de cono truncado y produjo
grandes erupciones explosivas hace 2910 y 2260 años según la datación de
radiocarbono. La mayoría de estos estratovolcanes es de finales del Pleistoceno, como
el Sarnoso en el lado SO y Fiuchá en el lado NO, y están ampliamente diseccionados
por los glaciares. Existen fisuras orientadas en cuatro direcciones principales que
influyen en la orientación de los conos del complejo Antillanca. Áreas termales se
encuentran en lugares dispersos en la parte noroeste del complejo.
Distancia a Villa La Angostura: 32,37 km.

76
Mocho-Choshuenco

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1513 =
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1937
conocida:
Cumbre
2422 7.946
de
m metros
elevación:
39.927 39 °
Latitud:
°S 55ʹ39 "S
72.027 72 °
Longitud:
°W 1ʹ37 "W

El sistema volcán Mocho­Choshuenco se compone de dos cubiertas de estratovolcanes


cubiertos por glaciares, situados al este del Lago Riñihue y SE de Lago Panguipulli
después de surgir de una caldera basáltica de 4 km de ancho. El pequeño estratovolcán
Choshuenco de 2415­m­de altura, está construido en el borde noroeste de la caldera y
es de finales de la edad glaciar. Una erupción pliniana de mayor producción de piedra
pómez Neltume ocurrió hace unos 10.300 años. Algo más grande es el volcán Mocho
de andesíta a dacítica con 2.422 metros de altura. Construido dentro de la caldera, es
postglacial y ha sido históricamente activo. Cráteres parásitos y conos de escoria
basáltica se encuentran en los flancos del Mocho­Choshuenco, sobre todo en los lados
NE y SO. Dos erupciones históricas han sido reportadas, uno en 1864 y otra en 1937.
Distancia a Villa La Angostura: 94,92 km.

77
Llaima

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1511 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 2009
conocida:
Cumbre
3125 10.253
de
m pies
elevación:
38 °
38.692
Latitud: 41ʹ30
°S
"S
71 °
71.729
Longitud: 43ʹ43
°W
"W

El Llaima, es uno de los volcanes más grandes y más activos de Chile, contiene dos
cráteres históricamente activos principales, uno en la cumbre y el otro, Pichillaima, a la
SE. El gran estratovolcán de 3.125 m de altura, predominantemente basáltico a
andesítico tiene un volumen de 400 km cúbicos. Un edificio construido principalmente
en el Holoceno con flujos de lava acumulada fue construido sobre una caldera de 8 km
de ancho que se formó hace unos 13.200 años atrás, después de la erupción de 24
kilometros cúbicos de ignimbrita. Más de 40 conos de escoria señalan puntos en los
flancos del volcán. Después del final de una fase explosiva de hace 7200 años, la
construcción del edificio actual comenzó. Este se caracteriza por ser estromboliano,
hawaiano, y poco frecuentes erupciones subplinianas. Frecuentes erupciones
explosivas moderadas con ocasionales flujos de lava se han registrado desde el siglo 17.
Distancia a Villa La Angostura: 222,52 km.

78
Copahue

Chile /
País:
Argentina
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1509 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 2000
conocida:
Cumbre
2997 9.833
de
m metros
elevación:
37.85 37 °
Latitud:
°S 51ʹ0 "S
71 °
71.17
Longitud: 10ʹ0
°W
"W

El volcán Copahue es un cono alargado compuesto construido a lo largo de la frontera


entre Chile y Argentina dentro de los 6,5 x 8,5 km de ancho la caldera que se formó
entre 0,6 y 0,4 millones de años, cerca de la margen noroeste de la caldera del Plioceno
de 20 x 15 kilómetros de Caviahue (Del Agrio). El cráter de la cima oriental, de 2 km de
largo, en línea ENE­OSO posee nueve cráteres, contiene un salado, uno ácido de 300
metros de ancho, Lago Crater (también conocido como El Agrio) y muestra una intensa
actividad fumarólica . Ácidas aguas termales escurren debajo de la salida oriental del
lago del cráter, lo que contribuye a la acidez del Río Agrio, y otra zona geotérmica se
encuentra dentro de la caldera de Caviahue a unos 7 km al NE de la cumbre. Poco
frecuentes y moderadas erupciones explosivas han sido registradas en Copahue desde
el siglo 18. En el siglo XX, las erupciones del cráter han expulsado rocas piroclásticas y
fragmentos de azufre líquido.
Distancia a Villa La Angostura:315,82 km.

79
Callaqui

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­091
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1980
conocida:
Cumbre
3164 10.380
de
m pies
elevación:
37.92 37 °
Latitud:
°S 55ʹ0 "S
71 °
71.45
Longitud: 27ʹ0
°W
"W

El estratovolcán Callaqui del Pleistoceno­Holoceno tiene un perfil de una canoa


invertida debido a su construcción a lo largo de 11 kilómetros de largo, SO­NE con una
fisura por encima de unos 1.2 hasta 0.3 millones años de antigüedad. Cubierto de hielo,
el volcán Callaqui de andesita­basalto 3.164 metros contiene bien conservados conos
volcánicos y coladas de lava que han viajado hasta 14 km. Pequeños cráteres de 100 a
500 m de diámetro, se encuentran principalmente a lo largo de una fisura que se
extiende por el flanco SO. Intensa actividad solfatárica se produce en la parte sur de la
cumbre, en 1966 y 1978, resplandor rojo se observó en las zonas de fumarolas (Moreno
1985, comunicación personal..). Los períodos de intensa actividad fumarólica han
dominado en el Callaqui, y pocas erupciones históricas son conocidas. Una erupción
explosiva se informó en 1751, hay datos inciertos de las erupciones en 1864 y 1937, y
una emisión de cenizas freática pequeña se observó en 1980.
Distancia a Villa La Angostura: 303,27 km.

80
Nevados de Chillán

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1507 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 2003
conocida:
Cumbre
3212 10.538
de
m pies
elevación:
36 °
36.863
Latitud: 51ʹ48
°S
"S
71 °
71.377
Longitud: 22ʹ36
°W
"W

El volcán compuesto de Nevados de Chillán es uno de los más activos de los Andes
Centrales de Chile. De finales del Pleistoceno al Holoceno estos tres estratovolcanes
fueron construidos a lo largo de una línea de NNO­SSE dentro de los tres calderas
anidadas del Pleistoceno, que produce hojas ignimbrita se extiende más de 100 km en
la Depresión Central de Chile. El mayor estratovolcán, predominantemente andesítico,
de 3212 metros de altura es el Cerro Blanco (Volcán Nevado), se encuentra en el
extremo NO del grupo, y 3.089 metros de altura Volcán Viejo (Volcán Chillán), que fue
el más activo durante el 17° a 19° siglos, ocupando el extremo SE. El nuevo Volcán
Nuevo, un domo de lava formado entre 1906 y 1945 entre los dos volcanes, creció hasta
superar al Volcán Viejo en altura. El Volcán Arrau, cúpula del complejo fue construido
SE del Volcán Nuevo entre 1973 y 1986, con el tiempo supero a su altura en 20 m.

81
Complejo Calabozos

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­042
Número:
Volcán
Caldera
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
3508 11.509
de
m pies
elevación:
35 °
35.558
Latitud: 33ʹ30
°S
"S
70 °
70.496
Longitud: 29ʹ47
°W
"W

El complejo de 26 x 14 kilometros compuesto tardío­Pleistoceno de calderas Calabozos


ha producido importantes riodacítico a dacítica hojas ashflow de ~ 200 a 500 pies
cúbicos de magma cada uno, denominados colectivamente como la Toba Loma Seca,
en el 0,8, 0,3, hace150.000 años. La actividades eruptivas se han mantenido en el
Holoceno, que forman 20­25 kilometros cúbicos de dacíta andesítica formando el
Cerro del Medio, complejo en el extremo sur de la caldera y las cuatro salidas de
clúster del Descabezado Chico, cerca del borde de la caldera occidental. De finales del
Holoceno, 2,5 kilometros cúbicos de lava dacítica y escorias del Descabezado Chico
viajaron 30 km al sur. Varios grupos de aguas termales están presentes a lo largo del
margen de la elevación central resurgiendo dentro de la caldera.

82
Descabezado Grande

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1505 =
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1933
conocida:
Cumbre
3953 12.969
de
m pies
elevación:
35.58 35 °
Latitud:
°S 35ʹ0 "S
70.75 70 °
Longitud:
°W 45ʹ0 "W

El Volcán Descabezado Grande es de finales del Pleistoceno al Holoceno. Es un


andesítico a riodacítico estratovolcán con un cráter en la cumbre de 1,4 km de ancho
lleno de hielo. Junto con los 3.788 metros de altura del Cerro Azul, a sólo 7 km hacia el
sur, los 3.953 metros de altura del Descabezado Grande se encuentran en el centro de
un campo de 20 x 30 km de calderas volcánicas. Un cráter lateral que se formó en el
flanco NNE superior en 1932, poco después del final de la gran erupción de 1932 del
cercano volcán Quizapu, en el flanco norte de Cerro Azul, fue el sitio de la única
erupción histórica del Descabezado Grande. Alto de las Mulas, fisura del Holoceno en
la parte baja del flanco noroeste del Descabezado Grande, ha producido pequeños
flujos de lava riodacítica. Numerosos centros volcánicos pequeños de finales del
Pleistoceno al Holoceno se encuentran al norte del volcán. La más septentrional de
ellas, Lengua de Vulcano (o Mondaca) produjo un flujo de lava riodacítico muy joven
que contuvo el Ría Lentué.

83
Maipo

Chile /
País:
Argentina
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­021
Número:
Volcán
Caldera
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1912
conocida:
Cumbre
5264 17.270
de
m pies
elevación:
34 °
34.161
Latitud: 9ʹ38
°S
"S
69 °
69.833
Longitud: 49ʹ58
°W
"W

El Maipo,es un estratovolcán cónico que se extiende en la frontera Chile­Argentina al


SE de Santiago, llena parcialmente la Caldera Diamante de 16 x 20 km del Pleistoceno,
formada alrededor de 0,45 millones de años atrás durante una erupción que produjo
alrededor de 350 kilómetros cúbicos de riolítas. Los conos del Pleistoceno del Volcán
Don Casimiro y Cerro Listado se formaron en el borde SO y flanco SO de la caldera,
respectivamente. El estratovolcán Maipo se eleva a unos 1.900 m sobre el suelo de la
caldera y fue construido por explosiones estromboliano vulcaniano. Tiene una
apariencia juvenil, y los depósitos de ceniza se superponen. Varios conos parásitos
fueron construidas en el flanco este de Maipo a lo largo de una serie de Echelon en NE
con rumbo fracturas. Los flujos de lava de uno de estos conos de drenajes bloqueados
en el año 1826 dentro de la caldera, formando el lago Diamante en el piso de la caldera
oriental.

84
Domuyo

País: Argentina
Subregión
Argentina
Nombre:
Volcán
1507­067
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno?
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
4709 15.449
de
m pies
elevación:
36.58 36 °
Latitud:
°S 35ʹ0 "S
70 °
70.42
Longitud: 25ʹ0
°W
"W

El Volcán Domuyo es un estratovolcán ubicado en el norte del Neuquén de 4.709


metros de altura de finales del Pleistoceno o posiblemente del Holoceno (Moreno 1985,
com. Pers.). Al menos 14 domos de lava dacítica y otros centros eruptivos se
construyeron dentro de una amplia zona de 15 km de ancho caldera, y al menos otros
cinco se encuentran fuera de la caldera. El mayor de estos últimos es el Volcán
Chanque­Mallín en el flanco ESE. Es truncado por una caldera de 4 km de ancho y
contiene una bóveda de resurgimiento.

85
Tinguiririca

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1503 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1917
conocida:
Cumbre
4280 14.042
de
m pies
elevación:
34 °
34.814
Latitud: 48ʹ49
°S
"S
70 °
70.352
Longitud: 21ʹ7
°W
"W

El Volcán Tinguiririca está compuesto de al menos siete conos de escoria al oeste de la


frontera entre Chile y Argentina del Holoceno construidos a lo largo de una fisura
NNE­SSO sobre un estratovolcán erosionado Pleistoceno. El complejo fue construido
durante tres ciclos eruptivos y data del Pleistoceno medio. La última actividad produjo
una serie de jóvenes estratovolcanes pequeños y cráteres, de los cuales los más jóvenes
parecen ser Tinguiririca y Fray Carlos. Actividad fumarólica constante se produce
dentro y en la pared noroeste del cráter de la cumbre del Tinguiririca, y las aguas
termales y fumarolas con depósitos de azufre se encuentran en los flancos occidentales
de los conos de la cumbre. Una sola erupción histórica del Tinguiririca se registró en
1917.

86
Huanquihue Grupo

País: Argentina
Subregión
Argentina
Nombre:
Volcán
1507­123
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
erupción 1750 ± 100 años
conocida:
Cumbre
2139 7.018
de
m metros
elevación:
39.88 39 ° 53ʹ0
Latitud:
°S "S
71.58 71 ° 35ʹ0
Longitud:
°W "W

Un grupo de jóvenes volcanes basálticos se encuentra en Argentina, cerca de la frontera


con Chile, al sur del volcán Lanín. El grupo de volcanes Huanquihué consiste en una
cadena de dirección NNE­SSO de estratovolcanes del Pleistoceno, algunas de las
cuales se encuentran a lo largo de la frontera. Un cono compuesto de ceniza del
Holoceno, con tres cráteres anidados hasta 400 m de diámetro, que ocupa un valle al
NE del Cerro Huanquihué y un cono de toba, construida dentro del lago glaciario
Epulafquen se encuentra en el extremo norte de la cadena. El crecimiento de este cono
de toba del Holoceno, La Angostura ("El estrechamiento"), ha creado una península
que forma un canal estrecho que conecta los lagos Epulafquen y Huechulafquen. Un
flujo de lava muy reciente de la base de un cono de cenizas Achin­Niellu (también
conocido como Cerro Escorial) viajó hacia el norte en el Lago Epulafquen, formando un
delta de lava prominente. El flujo de lava Escorial es un flujo muy joven que desvía los
drenajes locales y formaron nuevos lagos. La datación de radiocarbono estableció unos
200 años de antigüedad a este flujo, y los residentes locales cuentan historias orales de
la erupción, que fue observada por sus abuelos.
Distancia a Villa La Angostura: 84,61 km.

87
Laguna del Maule

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­061
Número:
Volcán
Caldera
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
3092 10.144
de
m pies
elevación:
36.02 36 °
Latitud:
° S * 1ʹ0 "S
70 °
70.58
Longitud: 35ʹ0
°W
"W

De 15 x 25 km de ancho, la caldera Laguna del Maule contiene un grupo de


estratovolcanes, pequeños domos de lava y conos piroclásticos del Pleistoceno­
Holoceno. La caldera se encuentra principalmente en el lado chileno de la frontera,
pero en parte se extiende en Argentina. Catorce flujos de lava basáltica del Pleistoceno
se ubican en la parte superior del valle del río Maule. Un grupo de conos de ceniza del
Pleistoceno fue construido en el lado noroeste de la Laguna del Maule, que ocupa parte
de la porción norte de la caldera. La última actividad produjo un cráter de explosión en
el lado este del lago y una serie de domos de lava riolítica del Holoceno y flujos de
bloques de lava que rodean la Laguna del Maule.

88
San Pedro-Pellado

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­062
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
3621 11.880
de
m pies
elevación:
35.989 35 °
Latitud:
°S 59ʹ21 "S
70 °
70.849
Longitud: 50ʹ58
°W
"W

El complejo volcánico San Pedro­Pellado (también conocido como San Pedro­Tatara)


ha estado activo desde el Plioceno al Holoceno. El edificio Tatara­San Pedro se
superpone al profundamente estratovolcán erosionado Pellado, ambos fueron
construidos dentro de la caldera de 6 x 12 kilometros del Río Colorado, que se formó
durante una erupción alrededor de 0,5 millones de años. El basalto­andesita Tatara
volcán de basalto­andesita en el extremo occidental del complejo contiene secuencias
de apilado de hasta 100 o más flujos de lava formando hasta 1500 m. El cráter de la
cumbre del estratovolcán San Pedro está cubierto por un glaciar y se sitúa a 3.621
metros de altura siendo dominantemente andesítico, cubre el edificio Tatara, y contiene
un cono de escoria joven que ha sido el sitio de las erupciones más recientes del
volcán. Uno de los principales en su flanco generó una avalancha de escombros que
llenó el valle sur del Río de la Puente y fue seguido por erupciones que produjeron
flujos de lava por el drenaje del Estero Pellado. No han sido registradas erupciones
históricas, pero existen fumarolas al SE de Pellado.

89
Caburgua-Huelemolle

País: Chile
Subregión
El centro de Chile
Nombre:
Volcán
1507­112
Número:
Volcán
Conos de ceniza
Tipo:
Volcán
Tephrochronology
Estado:
Última
5050 AC ± 1000
erupción
años
conocida:
Cumbre
4.908
de 1496 m
metros
elevación:
39.25 ° 39 ° 15ʹ0
Latitud:
S* "S
71.70 ° 71 ° 42ʹ0
Longitud:
W "W

Cuatro grupos de conos de ceniza basáltica se encuentran al este del Lago Villarrica y
del volcán Villarrica. Los grupos norte y sur, los Volcanes de Caburgua y Huelemolle,
respectivamente, se encuentran a lo largo de la mayor zona de falla regional de
Liquiñe­Ofqui. Los volcanes de Caburgua se encuentran en el extremo sur del Lago
Caburgua y consta de seis conos de escoria basáltica del Holoceno. Los flujos de lava
de estos conos ha contribuido a la obstrucción de los drenajes del río que se formó a
partir del lago. El grupo más al sur, el Volcán Huelemolle, consta de tres conos de
escoria basáltica del Holoceno entre los ríos Liucura y Pucón (o Minetué). Los otros
dos grupos de conos, el Volcán Redondo y Pichares, se encuentran al este del
Caburgua y Huelemolle. Evidencia estratigráfica indica que estos grupos de conos
basálticos han sido muy activos hace aproximadamente entre 6000 y hace 8000 años.
Distancia a Villa La Angostura: 156,55 km.

90
Antuco

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1508 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1869
conocida:
Cumbre
2979 9.774
de
m metros
elevación:
37 °
37.406
Latitud: 24ʹ21
°S
"S
71 °
71.349
Longitud: 20ʹ57
°W
"W

El Volcán Antuco, construido hacia el NE de la Sierra Velluda es un estratovolcán del


Holoceno, y se yergue por encima de la costa SO de la Laguna de La Laja. El Antuco
tiene una historia complicada a partir de la construcción de la Sierra Veluda de basalto
andesita y los estratovolcanes Cerro Cóndor, de la edad del Plioceno­Pleistoceno. La
construcción del volcán Antuco que fue a continuación del colapso del edificio de
principios del Holoceno que produjo una gran avalancha de escombros que viajó por el
Río Laja, al oeste y dejó un gran caldera de 5 km de ancho en forma de herradura por el
oeste. El cono mas moderno cuenta con gran pendiente y ha crecido cerca de 1.000 m
desde entonces, las fisuras y conos de los flancos también han estado
activas. Moderadas erupciones explosivas se registraron en los siglos 18 y 19 de los
centros de emisión de la cumbre y los respiraderos del flanco, y los flujos de lava
históricos han viajado en la cuenca del Río Laja.
Distancia a Villa La Angostura: 353,89 km.

91
Lonquimay

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1510 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1990
conocida:
Cumbre
2865 9.399
de
m metros
elevación:
38 °
38.377
Latitud: 22ʹ36
°S
"S
71 °
71.58
Longitud: 35ʹ0
°W
"W

El volcán Lonquimay es un pequeño y aplanado estratovolcán simétrico de finales del


Pleistoceno al Holoceno , edad dominante del Volcán Tolguaca o Tolhuaca ubicado
inmediatamente al SE. Un glaciar llena su cráter de la cumbre y se derrama por el
flanco sur. El volcán es dominantemente andesítico, pero las rocas basálticas y dacitas
también están presentes. Una fisura con tendencia E­O se encuentra presente, pero un
prominentes cortes de fisura con proyección NE­SO corren a través de todo el
volcán. El Cordón Oriental, zona fisural se extiende 10 km al NE y se han producido
una serie de respiraderos del flanco NE y conos de ceniza, algunos de los cuales han
sido la fuente de los voluminosos flujos de lava en el tiempo histórico. Grandes flujos
de lava han surgido durante los años 1887­90 y 1988­90 que viajaron hasta 10 km
desde los centros de emisión de su flanco NE.
Distancia a Villa La Angostura: 253,44 km.

92
Tolguaca (o Tolhuaca)

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­093
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
2806 9.206
de
m metros
elevación:
38 °
38.310
Latitud: 18ʹ36
°S
"S
71 °
71.645
Longitud: 38ʹ42
°W
"W

El Tolguaca es de finales del Pleistoceno al Holoceno, es un estratovolcán situado


inmediatamente NO del volcán Lonquimay. Sólo la actividad fumarólica se ha
producido desde el Tolguaca, de basalto andesita, durante el tiempo histórico. Una
zona de cráteres corre de NO­SE y su cráter más joven se ubica al NO. Otro grupo de
respiraderos de corte del sur y en los flancos oriental están orientados de SO­NE,
paralelos a la zona de los respiraderos del flanco del volcán Lonquimay, muy cercano,
y son en su mayoría de la edad postglacial (Moreno y Gardeweg, 1989). Informes de
las erupciones de 1876 y el 7 de enero de 1933, no han sido confirmados. La última
fecha probablemente se refiere a una erupción de los volcanes Lonquimay y Llaima
(Petit­Breuilh 1994, com. Pers.). La superficie erosionada por glaciares del Tolguaca
contrasta con su vecino de la misma altura, Lonquimay, y da fe de su edad.
Distancia a Villa La Angostura: 266,28 km.

93
Cerro Azul

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1506 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1967
conocida:
Cumbre
3788 12.428
de
m pies
elevación:
35 °
35.653
Latitud: 39ʹ12
°S
"S
70 °
70.761
Longitud: 45ʹ39
°W
"W

El Cerro Azul es un estratovolcán que está en el extremo sur de la cadena del sistema
eruptivo Descabezado Grande­Cerro Azul. De 3.788 metros de altura, el Volcán Cerro
Azul tiene un cráter en la cumbre de 500 m de ancho que se abre hacia el norte. Los tres
cráteres de "La Resoloma ", de basalto andesita y escoria, se encuentran por debajo del
flanco oeste y los dos conos de escoria de "Los Hornitos" en la parte baja del flanco SO.
El Quizapu, es una salida importante en el flanco norte de Cerro Azul, formada en 1846
durante la primera erupción histórica en Cerro Azul, acompañado por la emisión de
voluminosos flujos de lava dacítica que viajaron tanto al este como por el valle del
Estero Barroso, y al oeste en el valle del río Blanquillo . El Volcán Quizapu más tarde
fue la fuente de una de las mayores erupciones explosivas del mundo en el siglo 20 en
1932, que creó un cráter de 600­700 m de ancho y 150 m de profundidad y expulsó 9,5
kilómetros cúbicos de tefra dacítica.

94
Cerro Hudson

País: Chile
Subregi
ón El sur de
Nombre Chile
:
Volcán
Número 1508­057
:
Volcán Estratovolc
Tipo: án
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupció
n 1991
conocid
a:
Cumbre
6.250
de 190
metr
elevació 5 m
os
n:
45 °
45.9
Latitud: 54ʹ0
0°S
"S
72.9 72 °
Longitu
7 ° 58ʹ0
d:
W "W

El Volcán Hudson, cubierto de hielo, posee una caldera de 10 km. de ancho. El Volcán
Cerro Hudson no se reconoció hasta su primera erupción del siglo 20 en 1971. El Cerro
Hudson es el volcán más austral en los Andes chilenos relacionados con la subducción
de la placa de Nazca bajo la placa de América del Sur. Con 1.905 metros de altura, el
Cerro Hudson tiene una superficie de 300 kilómetros cuadrados. La caldera ha drenado
a través de una brecha en su borde NO, que ha sido la fuente de flujos de lodo por el
Río de Los Huemules. Dos conos de ceniza se ubican al norte del volcán y otros ocupan
los flancos SO y SE. El Hudson ha sido la fuente de varias de las principales erupciones
explosivas del Holoceno. Una erupción de 6700 años atrás fue una de las mayores
conocidas en los Andes del Sur durante el Holoceno, otra erupción cerca de 3600 años
atrás, produjo más de 10 kilometros cúbicos de tefra. Una erupción en 1991 fue la
segunda mayor de Chile del siglo 20 y formó un nuevo cráter de 800 metros de ancho
en la parte suroeste de la caldera.

95
Lanín

Chile /
País:
Argentina
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­122
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
560 AD ± 150
erupción
años
conocida:
Cumbre
3747 12.293
de
m pies
elevación:
39 °
39.633
Latitud: 37ʹ58
°S
"S
71 °
71.500
Longitud: 29ʹ59
°W
"W

El Volcán Lanín es un gran cono de finales del Pleistoceno al Holoceno en la frontera


Chile­Argentina. Este estratovolcán dominantemente basáltico a trachydacitico se
encuentra en el extremo oriental del grupo volcánico Villarrica con tendencia NO­SE
que es transversal a la cordillera de los Andes. Hermosamente simétrico, con sus 3.737
metros de altura, el Volcán Lanín se eleva 2500 metros sobre su base, posee una extensa
zona de escombros que desciende de los flancos superiores y hace alusión a una
caldera enterrada. El volcán se formó en cuatro etapas eruptivas que datan del
Plioceno, Pleistoceno temprano. Las dos últimas etapas se produjeron durante el
Pleistoceno tardío y el Holoceno. Una cúpula de lava pequeña en la cima ha
alimentado flujos de lava hacia el norte hace unos 2200 años atrás. El Lanín se informó
activo después de un terremoto en 1906, pero Sapper (1917) afirmó que los testimonios
de los periódicos están muy discutidos, y no se conocen erupciones históricas. Un
anillo de toba volcánica postglacial (Volcán Arenal) se encuentra por debajo del flanco
SO del Lanín en Argentina. Un flujo de lava más joven del Lanín cubre los depósitos
del Volcán Arenal y se extiende al sur en el Lago Paimún.
Distancia a Villa La Angostura: 119,98 km.

96
Quetrupillán

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­121
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1872
conocida:
Cumbre
2360 7.743
de
m metros
elevación:
39.50 39 °
Latitud:
°S 30ʹ0 "S
71 °
71.70
Longitud: 42ʹ0
°W
"W

Del Pleistoceno tardío­Holoceno, el Quetrupillán es un estratovolcán que está en el


centro de un grupo de tres volcanes con tendencia transversal a la cordillera de los
Andes. Construido dentro de una gran caldera de 7 km x 10 de ancho, y con 2.360
metros de altura cubierto de glaciares, el Volcán Quetrupillán contiene una caldera de
3,5 km de ancho que tiene más lavas silícicas que sus vecinos más prominentes
Villarrica y Lanín. El cono de escoria basáltica Huililco se encuentra a 12 km el NE del
Quetrupillán, un domo de lava riolítica se encuentra en el flanco sur de la caldera, y
produjo los Volcanes de Reyehueico de basalto­andesita 15 km al sur de la caldera de
la cumbre. Algunas de las actividades más recientes han producido los volcanes de
conos piroclásticos Llancahue cerca de la margen SO de la caldera. Petit­Breuilh (1994
com. Pers.) informó de una única erupción histórica de Quetrupillán en el año 1872.
Distancia a Villa La Angostura: 132,32 km.

97
Sollipulli

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­111
Número:
Volcán
Caldera
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
1240 ± 50
erupción
años
conocida:
Cumbre
2282 7.487
de
m metros
elevación:
38.97 38 °
Latitud:
°S 58ʹ0 "S
71 °
71.52
Longitud: 31ʹ0
°W
"W

Con una caldera de 4 km de ancho cubierta por un glaciar, el Sollipulli se encuentra al


este del complejo Nevados de Sollipulli del Pleistoceno. Grandes rocas silícicas y
piroclástos asociados con la formación de la caldera no se han encontrado, y la caldera
puede tener un origen no explosivo. Los depósitos posteriores a las erupciones se han
concentrado a lo largo de las paredes de la caldera y han aumentado su altura. Una
serie de domos de lava dacítica están alineados al este y sur de la caldera. El cráter
Alpehué de 1 km. de ancho corta el borde SW, y fue la fuente de una gran erupción
pliniana hace unos 2900 años. Cráteres de explosión y conos de escoria se encuentran
en los flancos exteriores de la caldera. Dos conos de lava en el flanco norte han
producido la última actividad documentada cerca de 700 años AP (Naranjo et al.,
1993). Este volcán de bajo perfil es menos importante que sus vecinos Llaima y
Villarrica, pero su historia explosiva hace que sea un centro volcánico potencialmente
peligroso.
Distancia a Villa La Angostura: 192,24 km.

98
Nevado de Longaví

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­063
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
4890 AC ± 75
erupción
años
conocida:
Cumbre
3242 10.636
de
m pies
elevación:
36 °
36.193
Latitud: 11ʹ35
°S
"S
71 °
71.161
Longitud: 9ʹ39
°W
"W

La forma cónica del volcán Nevados de Longaví, cubierto de glaciares, es de finales del
Pleistoceno al Holoceno. Este estratovolcán dominantemente andesítico se ha
construido sobre un basamento de rocas del Terciario volcanoclásticas y graníticas. Dos
colapsos del edificio han modificado el flanco oriental y SO de un volcán pre­
Holoceno, y la actividad del Holoceno se ha concentrado en la zona de la cumbre y en
las faldas orientales. Domos de lava andesíticos a dacíticos ocupan la zona de la
cumbre, y una cúpula del Holoceno forma la cumbre de 3.242 metros de altura del
Longaví. Las últimas erupciones han producido un domo de lava en la parte superior
de la escarpa de derrumbe y zona de la cumbre que se derrumbó parcialmente hacia el
este, formando bloques y cenizas de los depósitos de flujo. No se conocen erupciones
históricas, a pesar de actividad fumarólica continua.

99
Reclus

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­063
Número:
Volcán Cono de
Tipo: ceniza
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1908 ± 1 año
conocida:
Cumbre
1000 3.281
de
m metros
elevación:
50 °
50.964
Latitud: 57ʹ50
°S
"S
73 °
73.585
Longitud: 35ʹ5
°W
"W

El Volcán Reclus, es la fuente emisora de varias capas de tefra del Holoceno


patagónico. Fue reconocido como un edificio volcánico en 1987. El volcán de 1000 m de
altura, consta de un gran cono piroclástico dacítico con un cráter de aproximadamente
1 km de diámetro. Como muchos, con una media docena de capas de tefra recubre
una capa de turba que se ha fechado en 3780 años de antigüedad. El volcán está siendo
activamente erosionado por el glaciar Amalia, que drena el Campo de Hielo
Patagónico. El trabajo posterior reveló evidencia de erupciones históricas en los siglos
19 y 20.

100
Cochiquito Grupo Volcánico

País: Argentina
Subregión
Argentina
Nombre:
Volcán
1507­071
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
1435 4.708
de
m metros
elevación:
36.77 36 ° 46ʹ0
Latitud:
°S "S
69.82 69 ° 49ʹ0
Longitud:
°W "W

Un pequeño grupo de jóvenes volcanes argentinos se encuentra al norte de la ciudad


de Buta Ranquil en los extremos sur de la Provincia de Mendoza y extremo noreste de
la del Neuquén, cerca de donde el Río Grande y el Río Barrancas se unen para formar
el Río Colorado. El Volcán Cochiquito es un estratovolcán basáltico alcalino que se
estima del Pleistoceno­Holoceno y tiene ocho conos satélite. El Volcán Sillanegra (o
Malal) es un complejo de conos piroclásticos con dos cráteres y los flujos de lava
basáltica se situan al este del Río Grande. Su edad se estimó en el Holoceno (González­
Ferrán, 1995). Volcán Ranquil Sur del Sur es un pequeño estratovolcán de la Barranca
del Río con una estimación de la edad del Pleistoceno­Holoceno que contiene un cráter
de 600 metros de ancho y produjo material andesítico piroclásticos y flujos de lava.

101
Melimoyu

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­052
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Radiocarbono
Estado:
Última
200 DC ± 75
erupción
años
conocida:
Cumbre
2400 7.874
de
m metros
elevación:
44.08 44 ° 5ʹ0
Latitud:
°S "S
72 °
72.88
Longitud: 53ʹ0
°W
"W

El Melimoyu es un estratovolcán con un créter de 8 km de ancho y una gran caldera


enterrada situada a unos 40 km al noroeste de la localidad de Puyuhuapi. La caldera
llena de hielo se drena por un glaciar a través de una muesca en el borde de la caldera
al NE. El volcán basáltico­andesítico se alarga 10 km en dirección EO y tiene varios
conos de ceniza. Un cráter de 1 km de ancho, se encuentra en la cima del volcán. Dos
capas de tefra de finales del Holoceno han sido documentadas en el Melimoyu.

102
Mentolat

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­054
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1710 ± 5 años
conocida:
Cumbre
1660 5.446
de
m metros
elevación:
44.70 44 °
Latitud:
°S 42ʹ0 "S
73.08 73 ° 5ʹ0
Longitud:
° W "W

El Volcán Mentolat es una caldera llena de hielo de 6 km de ancho en la parte central


de la Isla Magdalena a través del Estrecho de Puyuhuapi en Puerto Cisnes. Una
erupción hace unos 7000 años produjo una capa de piedra pómez y escoria que se
extiende hacia el SE. Un flujo de aspecto joven de lava andesítica en el lado oeste del
volcán puede ser su producto más reciente. Los informes históricos de Serrano
describen una erupción a principios del siglo 18 que podría referirse a este flujo de
lava.

103
Tromen

País: Argentina
Subregión
Argentina
Nombre:
Volcán
1507­072
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 1822
conocida:
Cumbre
13.051
de 3978 m
pies
elevación:
37.142 37 °
Latitud:
°S 8ʹ30 "S
70.03 ° 70 ° 2ʹ0
Longitud:
W "W

El Tromen es un estratovolcán ubicado en el norte de la Provincia del Neuquén de


3.978 metros de altura que se encuentra en el extremo norte de un macizo volcánico
alargado. La cumbre del Tromen se corta por la superposición de dos calderas de 3,5
km de ancho. El Volcán Cerro Negro, del Pleistoceno, con una caldera de 5 km de
ancho, se encuentra inmediatamente al norte del Tromen, y flujos de lava del Tromen
tiene parcialmente obstruido el borde de la caldera norte. Al final de esta cadena con
tendencia SSO NNE esta el Cerro Tilhue, de la edad del Pleistoceno­Holoceno. La
caldera y después las bocas de ventilación en el Tromen se construyeron dentro de dos
calderas y en los flancos de la caldera NE mayormente. Los flujos de lava más joven en
el Tromen se originaron a partir de los respiraderos del flanco y descendió por los
lados norte y noreste del complejo volcánico andesítico a riolítico. Bocas de ventilación
del Holoceno también se encuentran en el área de Cerro Michico en la parte baja del
flanco NE. Las erupciones históricas del Tromen se registraron en la segunda mitad del
siglo 18 y en 1822. Von Wolff (1929) atribuye erupciones supuestas al Pomahuida en
1820, 1823, 1827, 1828 como del Tromen, pero estas no están confirmadas.

104
Palena Grupo Volcánico

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán
1508­051
Número:
Volcán Conos de
Tipo: ceniza
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
de Desconocido
elevación:
43 °
43.78
Latitud: 47ʹ0
°S
"S
72 °
72.47
Longitud: 28ʹ0
°W
"W

El grupo volcánico Palena consta de cinco conos de ceniza alineados con una
orientación NE NNE hacia el Volcán Melimoyu. Los volcanes jóvenes, que llevan el
nombre de el cono medio, son del Holoceno (Moreno 1985, com. Pers.).
Distancia a Villa La Angostura: 350,94 km.

105
Payún Matrú

País: Argentina
Subregión Sur de
Nombre: Mendoza
Volcán
1507­066
Número:
Volcán Escudo de
Tipo: volcán
Volcán
Holoceno
Estado:
Última
erupción Desconocido
conocida:
Cumbre
3680 12.073
de
m pies
elevación:
36.42 36 °
Latitud:
°S 25ʹ0 "S
69 °
69.20
Longitud: 12ʹ0
°W
"W

El Cerro Payún Matrú es un gran escudo volcánico de estilo hawaiano situado al sur de
Mendoza en la Argentina que se encuentra 530 kilometros de la fosa oceánica. La caldera
alcalina de 8 x 10 kilometros del Cerro Payún Matrú se formó hace unos 168.000 años. El
punto culminante del macizo es 3680 metros de altura es el estratovolcán Cerro Payún,
construido sobre el flanco SO del escudo. En el Pleistoceno un flujo de lava pahoehoe
viajó 181 kilometros. Su caldera después de las erupciones basálticas ha producido más
de 300 centros eruptivos, en su mayoría a lo largo de una tendencia EO de fisuras que se
extienden por la totalidad del escudo volcánico. Flujos de lava a partir de una
concentración juvenil de respiraderos en el flanco oeste conocida como Los Volcanes han
viajado más de 10 km. Otros grupos de ventilación de los 5.200 kilómetros cuadrados del
campo volcánico Payún Matrú se encuentran en los flancos más bajos NE y del sur, y un
flujo de lava del Volcán Santa María en el flanco NO viajó 15 km al NE. Al menos 30
domos de lava y flujos trachyandesiticos surgieron simultáneamente con las erupciones
basálticas de la gran fisura. La tradición oral cuenta que las tribus nativas estaban
presentes en el momento de la última erupción.

106
Planchón-Peteroa

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507­1504 =
Número:
Volcán
Estratovolcanes
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
erupción 2011
conocida:
Cumbre
4107 13.474
de
m pies
elevación:
35.240 35 °
Latitud:
°S 14ʹ24 "S
70 °
70.570
Longitud: 34ʹ12
°W
"W

Planchón­Peteroa es un complejo volcánico alargado que se extiende a lo largo de la


frontera entre Chile y Argentina con varias calderas superpuestas. Su actividad se
inició en el Pleistoceno con la construcción del Volcán Azufre de basalto­andesita,
seguido por la formación de basalto y andesita basáltica del Volcán Planchón, a 6 km al
norte. Hace unos 11.500 años, gran parte de Azufre y parte del Planchón se
derrumbaron, formando la gran avalancha de escombros de Río Teno, que viajó 95
kilometros para llegar al Valle Central de Chile. Posteriormente, el Volcán Planchón II
se formó. El volcán más joven, el Volcán Peteroa andesítico y basáltico, consta de
respiraderos dispersos entre Azufre y Planchón. El Peteroa ha estado activo en el
tiempo histórico y contiene un pequeño lago en el cráter humeante. Erupciones
históricas del complejo Planchón­Peteroa se han dado predominantemente explosivas,
aunque produjo flujos de lava en las erupciones de 1837 y 1937.

107
Puyuhuapi

País: Chile
Subregión El sur de
Nombre: Chile
Volcán Número: 1508­053
Conos
Volcán Tipo: de
ceniza
Holocen
Volcán Estado:
o
Última erupción Descono
conocida: cido
1.71
Cumbre de 524 9
elevación: m met
ros
44.3 44 °
Latitud: 0 ° 18ʹ0
S "S
72.5 72 °
Longitud: 3 ° 32ʹ0
W "W

Una cadena de conos de ceniza predominantemente basáltica con tendencia NE­SO


entró en erupción a lo largo de dos de las fisuras al extremo del fiordo Puyuhuapi y
constituyen los Volcanes de Puyuhuapi. El grupo más grande de los cuatro conos se
encuentra en el lado occidental del fiordo Puyuhuapi y los flujos de lava que generaron
viajaron hacia el SE hasta el mar. Un segundo lineamiento formó una cadena de cuatro
conos pequeños entre la cabeza del fiordo y el Lago Risopatrón, al norte. Las dos
fracturas están relacionadas con la zona de falla Liquiñe­Ofqui regional. Los conos de
ceniza Puyuhuapi están muy bien conservados, lo que sugiere una edad muy
temprana.

108
Villarica

País: Chile
Subregión El centro de
Nombre: Chile
Volcán
1507-1512 =
Número:
Volcán
Estratovolcán
Tipo:
Volcán
Histórico
Estado:
Última
2011 (en o
erupción
después)
conocida:
Cumbre
2847 9.340
de
m metros
elevación:
39.42 39 °
Latitud:
°S 25'0 "S
71 °
71.93
Longitud: 56'0
°W
"W

El Villarrica es uno de los volcanes más activos de Chile, se levanta sobre el lago y la ciudad del mismo
nombre. Es la más occidental de las tres grandes estratovolcanes con tendencia perpendicular a la
cordillera de los Andes. Se yergue sobre una caldera de 6 km de ancho formada durante el Pleistoceno
tardío. Una caldera de 2 km de ancho que se formó hace unos 3500 años atrás siendo la base de la
actividad actual. Más de 30 conos de escoria y salidas de fisura flanquean al Villarrica. Erupciones
plinianas y flujos piroclásticos que se han extendido hasta 20 kilómetros del volcán se han producido
durante el Holoceno. Los flujos de lava de hasta 18 km de largo se han emitido desde la cumbre y lo
flancos. Erupciones históricas, documentada desde 1558, han consistido en gran medida de intensidad
leve a moderada actividad explosiva con derrames de lava ocasionales. Lahares han dañado las
ciudades a sus flancos.

El volcán Mirador es un aparato central que cubre una superficie de ca. 30


km2 y sus productos son predominantemente basálticos. La zona central del
edificio está fuertemente erosionada y sólo se han preservado las lavas de
flanco, que exhiben intensa erosión glaciaria
Distancia a Villa La Angostura: 27,37 kilómetros.

109
Algunos aspectos sobre la amenaza y el riesgo volcánico

La amenaza tiene la siguiente expresión:


Av : f (l x P)
Donde:
I: intensidad, magnitud o volumen, duración del evento,
alcance, extensión, velocidad, temperatura)
P: Probabilidad
• probabilidad de ocurrencia de un determinado tipo de proceso
eruptivo en un intervalo de tiempo dado;
• ó la probabilidad de alcance máximo de los productos de
un proceso eruptivo;
• ó la probabilidad de distribución espacial de los productos
relacionados con un proceso eruptivo.
La amenaza volcánica es la probabilidad de ocurrencia de un evento volcánico de una
determinada intensidad, alcance o distribución en un tiempo y área determinada.
La amenaza volcánica (Av) está en función de la intensidad (magnitud o duración del
evento) y de la probabilidad de que dicho evento ocurra.
La base para la evaluación de la amenaza de un volcán es la reconstrucción de las
erupciones históricas y las prehistóricas, la geología y estratigrafía del área, por tanto la
disponibilidad de información geológica abundante es fundamental para llevar a cabo
una evaluación de amenazas y poder construir los mapas de amenaza correspondiente.
El proceso para la evaluación de la amenaza volcánica es muy complejo y es muy
difícil separar el análisis de la intensidad, de la probabilidad, sin embargo, con el fin de
darle una mayor claridad al documento, se presentaran de manera separada ambos
aspectos.
La evaluación de la intensidad de los procesos o eventos asociados a una erupción
volcánica implica el análisis de parámetros diferentes para cada evento, cada
parámetro influencia de diferente forma el grado de amenaza del volcán.
Entre estos factores o parámetros se mencionan los siguientes: tasa, volumen,
velocidad, temperatura, distancia de viaje desde el volcán hasta el área afectada, etc.
La evaluación de la amenaza volcánica a mediano y largo plazo implica lo concerniente
a la identificación, evaluación, cartografía y zonificación de la amenaza volcánica en
función de su probabilidad e intensidad. A corto plazo, estudios referidos al monitoreo
volcánico y a la preparación para enfrentar un posible proceso eruptivo.
Cada una de estos parámetros físicos influencian la capacidad del fenómeno de
producir daño, por ejemplo las variables que determinan la extensión de un flujo de
lava, de una corriente de densidad piroclástica o de un lahar son volumen, movilidad,
velocidad y transformaciones del flujo, mientras que para las caídas de tefra, la
intensidad se basa en la magnitud en función del volumen total de tefra caída o en la
relación espesor versus distancia del centro de emisión, lo cual puede ser conocido de
anteriores caídas de tefra y de los modelos regionales de circulación de los vientos;
otros autores han definido zonas circulares a varias distancias y han identificado los
sectores hacia los cuales el viento sopla
con mayor frecuencia. En el caso de los flujos de lava la intensidad se puede medir en
función de los espesores de los flujos, la velocidad del movimiento y la extensión areal
que

110
cubren estos flujos. A manera de resumen se presentan en la tabla siguiente una serie
de parámetros, para cada proceso eruptivo y la intensidad que puede estar asociada a
ellos:
Distancia del impacto (km desde el centro de emisión) < 10 Extremo 10­20 Alta > 10
Media
< 10 Alta 10­30 Media > 30 Baja < 30 Alta 30­100 Media > 100 Baja < 30 Alta 30­100
Media
> 100 Baja < 1 Alta 1­5 Media > 5 Baja
Volumén (m3) >103 Alta 106­108 Media > 106 Baja >1m Alta 0.3 ­ m Media > 0.3 m Baja
Espesor Indice de explosividad (VEI) > 4 Alta 2 ­ 4 Media 0 ­ 2 Baja
Intendidad Proceso Eruptivo: flujos piroclásticos, flujos de lava, gases, caídas de tefra,
proyecciones balísticas.
Para determinar la probabilidad de ocurrencia de una erupción volcánica de
características
definidas es importante realizar una extrapolación estadística de los patrones de la
actividad volcánica pasada. Una aproximación estadística se justifica por el hecho de
que los volcanes son sistemas complejos regulados por procesos aleatorios.
El reconocimiento de las distribuciones estadísticas de la ocurrencia de las erupciones y
los períodos de reposo, partiendo de la premisa básica de que el comportamiento
futuro de un volcán está contenido en su actividad pasada.
En el caso de la amenaza volcánica, se puede estimar la probabilidad de ocurrencia de
un determinado proceso de una magnitud dada, de igual forma también se puede
estimar a probabilidad de que un determinado evento tenga una extensión o alcance
determinado.
Es sumamente difícil predecir el tiempo exacto de una erupción volcánica y la razón
principal es la gran complejidad en la interacción de factores que gobiernan el
comportamiento de un volcán por lo que una erupción puede ser considerada como un
evento aleatorio en el tiempo y la secuencia de erupciones como un ejemplo de proceso
estocástico (Wickman,1965).
Los mapas de amenaza volcánica (intensidad vs frecuencia o Tr) son utilizados en los
procesos de planificación y gestión territorial, por lo que estos deben representar el uso
que se le puede dar y los daños potenciales a que este uso estaría expuesta una
determinada zona:
Las personas están en peligro tanto adentro como afuera de los edificios. Existe un alto
peligro de destrucción total y repentina de edificios, viviendas, cultivos, etc.
Los eventos se manifiestan con una intensidad relativamente débil, pero con una
frecuencia elevada. En este caso, las personas están sobre todo amenazadas afuera de
los edificios. Las personas están en peligro afuera de los edificios, pero no o casi no
adentro. Se debe contar con daños en los edificios, pero no destrucción repentina de
éstos, siempre y cuando su modo de construcción haya sido adaptado a las condiciones
del lugar.
El peligro para las personas es débil o inexistente. Los edificios pueden sufrir daños
leves, pero puede haber fuertes daños al interior de los mismos, daños a la agricultura,
abrasión, corrosión por gases a maquinarias, equipos y herramientas.
Existen amenazas que tienen una probabilidad de ocurrencia muy débil y que se
pueden manifestar con una intensidad fuerte.

111
Zona de prohibición, no apta para la instalación, expansión o densificación de
asentamientos humanos.
Áreas ya edificadas deben ser reubicadas, o protegidas con medidas de reducción de
amenaza, obras de protección, sistemas de alerta temprana y evacuación temporal.
Zona de reglamentación, en la cual se puede permitir la expansión y densificación de
asentamientos humanos, siempre y cuando existan y se respeten reglas de ocupación
del suelo y normas de construcción apropiados.
Construcciones existentes que no cumplan con las reglas y normas deben ser
reforzadas, protegidas o desalojadas y reubicadas.
Zona de sensibilización, apta para asentamientos humanos, en la cual la población
debe ser sensibilizada ante la existencia de amenazas moderadas y poco probables,
para que conozcan y apliquen reglas de comportamiento apropiadas ante éstas.
Zona de sensibilización, apta para asentamientos humanos, en la cual los usuarios del
suelo deben ser sensibilizados ante la existencia de amenazas muy poco probables,
para que conozcan y apliquen reglas de comportamiento apropiadas ante éstas.
Los volcanes han sido respetados por su pavoroso poder y temidos por su capacidad
de causar muerte y destrucción. El rango de los fenómenos eruptivos y las
consecuencias secundarias es amplio y esa diversidad hace que el estudio de los
volcanes sea un compromiso particularmente complejo para los científicos y los
trabajadores de salud (6). Los fenómenos más peligrosos son los flujos piroclásticos y
las avalanchas (flujos de lodo con detritos volcánicos), los cuales se mueven como las
corrientes de gravedad. El riesgo de lesión o muerte asociada con esos fenómenos
depende de: 1) el tamaño y la naturaleza de la erupción, 2) los factores topográficos
locales y 3) la proximidad de la población al volcán. Además, los gases asfixiantes
formados durante una erupción son más peligrosos cerca de los cráteres o fisuras
ubicadas en los flancos del volcán. Dado que la gravedad es crucial para el flujo de los
sólidos volcánicos y de los gases densos, quienes viven en las áreas bajas y en los valles
cerca del volcán están en mayor riesgo de lesiones o muerte. Los expertos que estudian
los volcanes críticamente activos conocen bien la importancia de asegurar que la gente
evite vivir en esas áreas tanto como sea posible y de poner especial atención a los
riesgos que enfrentan las comunidades en esos lugares. Una ráfaga es una fuerza
explosiva y si ocurre una erupción, es probable que esté confinada cerca de la abertura
o avance localmente en explosiones, como ocurre cuando los materiales calientes caen
en los lagos. Producen un ruido que se escucha a grandes distancias y pueden romper
ventanas y causar laceraciones por vidrios rotos. Los fragmentos de roca de diferentes
tamaños pueden ser arrojados explosivamente en cualquier momento, causando lesión
o muerte, y en las erupciones masivas pueden ser liberados sobre una amplia zona
alrededor del volcán. Los proyectiles grandes pueden dañar las viviendas y, si son
candentes, causar incendios. En los cráteres pueden ocurrir pequeñas erupciones con
poco aviso. Por ejemplo, en el Monte Etna en Sicilia, 1979, nueve turistas que visitaban
el volcán murieron después de pequeñas erupciones y en el Galeras, Colombia, 1993,
seis científicos que trabajaban al lado del cráter murieron sin anuncio. Esas liberaciones
de energía a pequeña escala causadas por gases reprimidos o mecanismos similares
son un riesgo ocupacional serio para los vulcanólogos que trabajan cerca de las bocas
de los volcanes.
Los flujos y oleadas piroclásticas son mezclas de gases calientes, ceniza, piedra pómez
y rocas que son impulsadas primariamente por la gravedad y se pueden formar por el

112
colapso de una erupción vertical o salir directamente al borde del cráter. Es importante
visualizar esos flujos y oleadas como corrientes de gravedad que se mueven como
nubes de gas denso y que son capaces de extenderse ampliamente y causar destrucción
masiva. Pueden viajar a velocidades de 50 a 150 km por hora, una velocidad que, junto
con el contenido sólido del flujo, crean un poderoso ímpetu destructor muy parecido al
de los huracanes. Muchos flujos y oleadas se inician a altas temperaturas (600­900 oC)
y algunos se pueden enfriar rápidamente si son turbulentos y se mezclan con aire
durante su viaje. En algunos casos, en la periferia del flujo, la temperatura pico y la
concentración de partículas densas pueden ser tan efímeras que las personas incluso
pueden sobrevivir al aire libre y a menudo las casas fuertes pueden proteger a las
personas que permanecen dentro. Las oleadas piroclásticas son flujos diluidos que
pueden dejar depósitos de pocos centímetros de espesor; sin embargo, pueden ser
altamente destructivas cuando surgen del volcán a elevadas temperaturas y con altos
niveles de energía. Muchos flujos piroclásticos vienen a levantar una oleada que se
extiende varios kilómetros más lejos y la cual puede estar lo suficientemente caliente
para causar quemaduras severas a la vegetación. También pueden estar presentes
gases como vapor de agua, dióxido de carbono y de sulfuro, al menos en pequeñas
concentraciones. La primera oportunidad para investigar las causas de muerte por
flujos piroclásticos fue luego del impacto de la erupción del Monte Santa Helena el 18
de mayo de 1980. A pesar de la alerta oficial y del establecimiento de zonas
restringidas, más de 160 personas, incluyendo unos pocos leñadores, estaban en
cercanías del volcán en el momento de la erupción. Las líneas de árboles descuajados
marcaron un abrupto punto de corte de las máximas fuerzas dinámicas en una área de
destrucción a más de 27 km del cráter. Las autopsias de los 25 cuerpos recuperados
mostraron que 17 muertes ocurrieron por asfixia al inhalar cenizas y 5 por lesiones
térmicas. Tres de los muertos eran leñadores en un paraje a 19 km del cráter; dos
sobrevivieron al flujo pero sufrieron quemaduras de segundo y tercer grado que
afectaron el 33 y el 47% de sus superficies corporales, respectivamente. Los dos
leñadores murieron después por un síndrome de dificultad respiratoria del adulto
inducido por la inhalación de partículas de cenizas calientes. Tres personas murieron
con trauma cefálico por caídas de árboles o rocas. La tasa de mortalidad asociada con
esta erupción fue cercana al 50% después de incluir aquéllos ubicados en la periferia
del flujo, que también fueron contados. Este hallazgo es sorprendentemente bajo
considerando que todas las víctimas y sobrevivientes fueron sorprendidos al aire libre
en el momento de la erupción. La mejor evidencia disponible para la protección
ofrecida por las viviendas se obtuvo después de la erupción del volcán San Vicente en
1902 . Las personas que se protegieron a sí mismas de la erupción dentro de casas
firmes con ventanas selladas, sobrevivieron, mientras que aquéllas que permanecieron
afuera murieron, al igual que los animales no protegidos. En una erupción del Monte
Unzen en Japón en 1991, dos vulcanólogos y 39 periodistas murieron por una oleada
de alta temperatura aunque 8 personas que estaban en casas cercanas y 1 dentro de un
carro, sobrevivieron. Los hallazgos en estas diferentes erupciones tienen importantes
implicaciones para la planeación de emergencias en viviendas levantadas alrededor de
volcanes. Con todo, la evacuación debe ser la medida preventiva clave, dado que la
magnitud y la energía de los flujos son impredecibles. Por ejemplo, en otra erupción en
1902 del Monte Pelee en Martinica, únicamente 2 de las 28.000 personas dentro del
pueblo de Saint Pierre sobrevivieron al flujo piroclástico que devastó esa ciudad. Las

113
avalanchas (deslizamientos de lodo es otra designación, pero no necesariamente
precisa, para este escurrimiento de agua y detritos volcánicos) son frecuentes
acompañantes de las erupciones y son, por lo menos, tan mortales como los flujos
piroclásticos. El calor de los flujos piroclásticos, la lava y las ráfagas de vapor pueden
fundir glaciares y nieve, o lluvias intensas pueden acompañar las erupciones de ceniza.
Cuando el agua se mezcla con las cenizas y los detritos de roca, se forma un enorme
volumen de material cuya consistencia varía desde un escurrimiento diluido hasta una
pasta delgada o un concreto húmedo. Los lagos en el cráter, si están presentes, pueden
ser también una fuente importante de agua y las avalanchas pueden expandir mucho
más su volumen cuando fluyen por los lagos y cuando se les incorpora tierra suelta
que se ha erosionado de los valles del río. Una gran avalancha es capaz de aplastar
todo a su paso incluyendo casas, carreteras y puentes. Después de la erupción del
Monte Santa Helena, las avalanchas viajaron por los ríos Cowlitz y Toutle y entraron
por el río Columbia tan lejos como a la ciudad de Portland. El promedio de velocidad
de este flujo a lo largo del valle fue tan sólo de 32 km por hora, lo que dió tiempo para
que las personas que vivían en su ruta escaparan. En contraste, en 1985 la falta de
preparación resultó en la gran avalancha del volcán Nevado del Ruiz en Colombia que
enterró la ciudad de Armero a 48 km de distancia y causó la muerte a 23.000 personas.
Dado que los valles de los ríos son los cursos naturales de las avalanchas, las
inundaciones pueden ser una consecuencia inmediata ya que los detritos caen en los
ríos y lagos. Adicionalmente, los materiales alteran los niveles y cursos de los ríos
existentes, produciendo un serio riesgo de futuras inundaciones si ocurren lluvias
intensas. Las inundaciones también pueden ser causadas por las avalanchas en lagos o
por hielo y nieve derretida. Las grandes erupciones como la del Monte Pinatubo, llenan
valles profundos con piroclasto y otro material eruptivo y las intensas lluvias pueden
movilizar el material durante años. El agua que rebasa los ríos y canales, rápidamente
erosiona las riberas y las viviendas cercanas son socavadas o inundadas rápidamente.
Este problema ha sido particularmente serio en las áreas planas alrededor del Monte
Pinatubo y ha resultado en el desplazamiento de decenas de miles de personas. Las
cenizas caídas, fruto de grandes erupciones, pueden causar destrucción y daño
ambiental en amplias áreas, tan lejos como cientos de kilómetros abajo del volcán. Las
grandes precipitaciones de cenizas (más de 25 cm de espesor) pueden poner en riesgo
la vida por el peso sobre el techo de las edificaciones. En el pasado, ese peligro no
había sido enfatizado lo suficiente, como lo ilustran dos recientes erupciones. En la del
Monte Santa Helena, el impacto y el tamaño de ellas en el centro del estado de
Washington no había sido anticipado. Aunque el espesor máximo de la ceniza fue
levemente mayor de 4 cm, cuando la nube del 18 de mayo arribó, todas las actividades
económicas, especialmente las vías, el metro y el transporte aéreo, se pararon durante 5
días por la drástica reducción de la visibilidad como resultado de la interferencia
causada por la ceniza suspendida en el aire. La parálisis continuó hasta que un
inesperado aguacero compactó la ceniza y la adhirió al terreno. Las tres grandes
erupciones de 1980 fueron de mediana magnitud para el Monte Santa Helena, el cual
en una erupción pasada había dejado un depósito de cenizas de 30 cm de espesor a una
distancia de 80 km. Dependiendo de la dirección predominante del viento, si semejante
caída de ceniza ocurriera hoy, podría causar trastornos masivos en ciudades tan
grandes como Portland, Oregon, al oeste del volcán. En 1991, en el Monte Pinatubo,
por lo menos, murieron 300 personas y un número similar fue seriamente lesionado en

114
edificaciones cuyos techos colapsaron bajo el peso de la ceniza; aunque el espesor en
algunas de las ciudades afectadas sólo fue de 10 cm, su densidad estaba aumentada
por las intensas lluvias que hubo durante la erupción. Una nube volcánica que
contenga ceniza y gases viajará en la dirección predominante del viento llevando muy
lejos las partículas más finas y livianas. Los gases y otros materiales volátiles son
adsorbidos en las partículas de ceniza, y al ser rápidamente solubles, serán sacados por
la lluvia en las corrientes de agua o en lo que se siembra. Dependiendo del tipo de
volcán, el flúor del ácido sulfhídrico puede ser un riesgo tóxico durante la caída de
cenizas. Los granjeros en Islandia son conscientes del peligro de las erupciones del
volcán Hekla, pues tan sólo 1 mm de depósito de ceniza sobre la hierba mató miles de
ovejas. También se pensó que el envenenamiento por flúor mató al ganado después de
la erupción del Lonquimay en Chile, 1988. Muchas ovejas también murieron después
de la erupción del monte Hudson en Chile en 1991, pero esas muertes fueron
probablemente debidas a inanición más que a causas tóxicas. Durante las grandes
erupciones, una placa profunda de ceniza puede causar gran. Profundidad máxima de
la caída de ceniza de la erupción del Monte St. Helens, estado de Washington, 1980.
La ceniza volcánica se puede producir por la explosión y el desmoronamiento de rocas
viejas (líticas) así como por la descarga de presión sobre el magma (líquido fresco de
roca) dentro del volcán. El tamaño de las partículas y su composición mineral varía
entre volcanes y aun entre erupciones de un mismo volcán. Las cenizas emitidas
recientemente imparten un olor sulfuroso o picante al aire y el material volátil
adherente se adiciona al efecto irritante que las cenizas finas pueden tener sobre los
pulmones. Las partículas de ceniza producidas en erupciones explosivas son a menudo
lo suficientemente pequeñas para ser rápidamente inhaladas en lo profundo de los
pulmones y las partículas más gruesas pueden alojarse en la nariz o en los ojos e irritar
la piel. En la caída de cenizas del Monte Santa Helena (18 de mayo de 1980), más de
90% de las partículas estaban en el rango respirable (<10 micras). Las erupciones del
Monte Santa Helena de 1980 permanecen como el único ejemplo bien documentado en
el cual la vigilancia epidemiológica fue asumida después de una erupción volcánica.
Las tendencias en las visitas a salas de urgencias y los ingresos hospitalarios después
de cada erupción revelaron incrementos en el número de pacientes en busca de
tratamiento para el asma y la bronquitis. Además, un estudio de hogares en Yakima,
Washington, mostró que cerca de un tercio de los pacientes con enfermedad pulmonar
crónica que no enfermaron lo suficiente como para acudir al hospital en el momento de
la erupción, de todos modos experimentaron una marcada exacerbación de sus
síntomas respiratorios durante el período en que subieron los niveles de cenizas
respirables que continuaron elevados por más de 3 meses después de la erupción. Esos
pacientes indudablemente estarían más seriamente afectados si no hubiesen atendido
el aviso de las autoridades de salud pública y su propio sentido común para
permanecer en casa durante las peores condiciones. No se atribuyeron muertes a los
efectos respiratorios de las cenizas. A pesar de la falta de datos epidemiológicos, hay
pocas dudas de que el impacto de erupciones similares sería mayor en los países
menos privilegiados donde las casas resisten menos la filtración de partículas. Así, en
1992, después de la erupción de Cerro Negro en Nicaragua, se reportó un incremento
en los casos de asma pero la subutilización de los servicios de salud por la población
hizo imposible un abordaje completo de la magnitud del impacto. En contraste, un
sistema de vigilancia epidemiológica establecido por el Departamento de Salud de

115
Filipinas después de la masiva caída de cenizas del Monte Pinatubo, no encontró
ningún incremento en los problemas respiratorios en las comunidades afectadas,
hallazgo inesperado que puede atribuirse a la compactación y la sedimentación de las
cenizas por las intensas lluvias que acompañaron la erupción. En las erupciones del
Pinatubo y el Santa Helena (18), la ceniza contenía de 3 a 7% de cristal de sílice, un
mineral que causa silicosis; la mayoría de las partículas estaba en el rango respirable.
La exposición ocupacional a cenizas suspendidas de trabajadores. La irritación de los
ojos y las abrasiones menores de la córnea pueden resultar de las partículas de ceniza
que entran en el ojo. Esos efectos no son normalmente serios, pero quienes trabajan al
aire libre y quienes usan lentes de contacto deben usar máscaras o gafas protectoras
cuando trabajan fuera. Muchas edificaciones son vulnerables a la acumulación de
pesadas cenizas, especialmente si están húmedas. En la erupción del Pinatubo, las
edificaciones con luces amplias como iglesias y edificios públicos, tenían 5 veces más
riesgo de colapso que las viviendas. La susceptibilidad de las grandes construcciones al
colapso es especialmente importante dado que se pueden usar como albergue para
grupos de personas desplazadas. Las viviendas endebles son especialmente propensas
a colapsar bajo el peso de las cenizas. Las acumulaciones de ceniza pueden ser rápidas
(tanto como 25 cm en una hora) en ciertas erupciones. Las advertencias para mantener
libres de ceniza los techos pueden ser imposibles de seguir en tales circunstancias y
pueden ser necesarios dictámenes especiales para reforzar temporalmente los tejados
con soportes o albergarse en las partes más resistentes de la casa mientras cesa la caída
de cenizas.Las cenizas se deben examinar de rutina para determinar su toxicidad
química después de las erupciones, ya que la gente está usualmente ansiosa del riesgo
real o imaginado para la salud humana y del ganado. Los animales de pastoreo se
pueden envenenar a través de la hierba o de las aguas con cenizas. Además, el pH de
los ríos puede estar disminuido por la ceniza ácida y, entonces, se comprometen los
peces. Los lagos y los ríos usados por humanos y animales para beber agua se deben
examinar si se sabe o se sospecha que puedan tener un alto contenido de flúor. Niveles
elevados de flúor (tan altos como 9 ppm) se midieron en arroyos después de las
erupciones del Hekla en 1947 y 1990 en Islandia. Las personas susceptibles también
podrían tener reacciones adversas por beber aguas contaminadas y, por tanto, es mejor
dar aviso para que usen fuentes alternativas hasta que desciendan los niveles, lo que
puede ocurrir en pocos días, especialmente después de lluvias intensas. El radón se
puede emitir en grandes cantidades en las columnas de erupción donde es improbable
estar en alto riesgo, pero el radón se puede adherir a las partículas de ceniza y exponer
a la población en riesgo a la radiación. Las cenizas mismas pueden tener un alto
contenido de uranio y se requiere examinar su radiactividad si proviene de un volcán
con magma bien diferenciado. El usar ciertos materiales volcánicos para construir
viviendas en algunas partes de Italia ha resultado en elevados niveles de radón en el
aire intradomiciliario. Como en otro tipo de desastres naturales o situaciones caóticas,
la amenaza de una inminente erupción volcánica o el tener que vérselas con el
resultado de una gran erupción, pueden llevar a la ansiedad o la depresión o a
experimentar desórdenes de estrés postraumático. Los trastornos y alteraciones de la
vida normal causados por fenómenos como las repetidas caídas de cenizas, la
contaminación del aire por gases volcánicos o la continua amenaza de avalanchas
afectan sobre todo a las familias reubicadas, o a quienes han visto destruidas o
severamente averiadas sus casas, negocios o granjas. Por ejemplo, aunque no hubo

116
evidencia de daño mental severo luego del impacto de la erupción del Monte Santa
Helena (18/05/80), en las comunidades locales la gente experimentó reacciones
adversas en salud mental.
Virtualmente todos los medios de transporte paran ante una intensa caída de ceniza
dada la impenetrable oscuridad y su efecto negativo sobre los motores de automóviles,
trenes y aviones. En el peor pero más probable escenario futuro, las ciudades caerían
en una virtual parálisis por días en el caso de una masiva caída de ceniza, con todas las
obvias implicaciones para los servicios de emergencia y las líneas vitales. Las varadas y
los accidentes vehiculares debidos a la poca visibilidad o las vías resbaladizas, pueden
sumarse al caos. Una tarea importante de los agentes de tránsito es controlar el paso de
vehículos para permitir solamente el de los esenciales. No sólo los servicios de
transporte se verán severamente afectados por las cenizas, sino que las transmisiones
de radio y televisión pueden sufrir una seria interferencia mientras la ceniza está
cayendo y las antenas se pueden dañar por las elevadas precipitaciones. Los sistemas
telefónicos rápidamente se sobrecargan con personas ansiosas. Los teléfonos, los
equipos de transmisión y las computadoras se dañan fácilmente por las partículas finas
infiltrables. Las comunicaciones por satélite cumplen un invaluable papel cuando están
disponibles. La ceniza húmeda es un buen conductor de la electricidad y una placa de
ceniza sobre un aislante no protegido puede provocar un cortocircuito en un equipo
externo y, en consecuencia, interrupciones de energía. Además, los ingenieros se
pueden ver impedidos en sus tareas de reparación si la visibilidad es tan restringida
que no pueden mover los vehículos. Muchas de las consecuencias de las interrupciones
de energía son bien conocidas, pero menos obvia es la falla en el suministro de agua
dependiente del bombeo eléctrico. Los suministros de agua también se pueden ver
restringidos por la caída de cenizas en los reservorios y ríos, que causan obstrucciones
en las entradas y plantas de filtración. Además, la calidad del agua puede estar
comprometida por turbidez y cambios
del pH. La maquinaria para la disposición de basuras se ve rápidamente sobrecargada
y puesta fuera de acción por la ceniza abrasiva. Intensos relámpagos frecuentemente
acompañan a las nubes de ceniza a muchos kilómetros del volcán y se pueden sumar a
la sensación general de alarma y temor. La caída de rayos sobre el terreno puede
causar muertes e incendios en la vecindad de un volcán.
Los detritos y las cenizas que caen alrededor de los volcanes pueden obstruir los ríos y
rellenar los lagos y las inusuales inundaciones y acumulaciones de agua pueden
favorecer la transmisión de enfermedades infecciosas endémicas como leptospirosis y
malaria (ver capítulo 5, ‘Enfermedades transmisibles y su control’). Los volcanes
elevados ejercen un efecto de “chimenea” que, junto con el calor y la fuerza de una
erupción, resultan en la dispersión de gases en la atmósfera. Sin embargo, hay
ocasiones en las cuales los gases pueden concentrarse, o ser liberados, en el suelo.
Algunos volcanes liberan rápidamente gases durante los períodos de silencio entre las
fases eruptivas mayores. Una investigación reciente ha demostrado que aun los
volcanes con mínima evidencia de actividad pueden estar liberando dióxido de
carbono y radón desde el magma profundo por difusión en el terreno y el flujo de esos
gases podría elevarse rápidamente después de una erupción. Las muertes provocadas
por los gases son raras comparadas con otras muertes relacionadas con los volcanes,
aunque se debe admitir que los efectos de los gases sobre los humanos durante las
erupciones no han sido bien documentados. Las emisiones volátiles principales son

117
vapor de agua, dióxido de carbono (CO2), ácido sulfhídrico (H2S) y dióxido de sulfuro
(SO2), seguidos de ácido clorhídrico (HCl), ácido fluorhídrico (HF), monóxido de
carbono (CO), hidrógeno (H), helio (He) y radón (Rn). Las emisiones volátiles
inorgánicas, como mercurio, también pueden ser importantes en ciertos volcanes (por
ejemplo, en Kilauea, con el potencial de contaminación ambiental). Los materiales
orgánicos volátiles (por ejemplo, hidrocarburos polinucleares aromáticos y
halogenados) también pueden ser detectados en pequeñas cantidades en nubes
eruptivas, particularmente si el calor de la erupción ha incinerado árboles y otros
vegetales. En las nubes de las erupciones del Monte Santa Helena también se
encontraron apreciables cantidades de sulfuro de carbonilo, disulfuro de carbono y
dióxido de nitrógeno. Desde el punto de vista de los efectos en salud, los gases
volcánicos pueden ser clasificados como asfixiantes (dióxido de carbono) o como
irritantes respiratorios (dióxido de sulfuro). La acumulación de gases asfixiantes en
concentraciones letales es más probable en las pendientes de un volcán, dentro de un
cráter o cerca de una fisura, mientras que los gases irritantes pueden ejercer sus efectos
a mucha menor concentración a muchos kilómetros del volcán. Los animales que pacen
en la cercanías o sobre las pendientes de ciertos volcanes peligrosos se han asfixiado,
probablemente por CO2, el cual es más denso que el aire. También se ha reportado que
el ácido sulfhídrico mata pájaros y causa ceguera en las ovejas. Quienes merodean en
las áreas volcánicas también están en riesgo por los gases asfixiantes. Cerca de las
fumarolas, la presencia de gases ácidos altamente irritantes hace difícil la respiración
cuando se alcanzan altas concentraciones y esa intolerancia ayuda a proteger contra la
sobreexposición ­ al menos irritante pero más venenoso gas ­ H2S. Sin embargo, han
ocurrido muertes en clima apacible sobre el volcán Kusatsu­Shirane en Japón, donde
las emisiones han sido principalmente H2S y CO2. Los esquiadores no percibieron que
el H2S estaba presente (el olor a huevo descompuesto de ese gas no se puede detectar
en concentraciones elevadas). Los vulcanólogos que trabajan en áreas de cráter también
pueden no percibir la presencia de H2S y siempre deben portar un medidor para
detectarlo. Las emisiones de gas, en el suelo de los flancos de los volcanes o en calderas
inactivas, pueden ser lo suficientemente elevadas para implicar riesgo dentro de las
casas. Por ejemplo, en el poblado de Furnas en las Azores de 2.000 habitantes,
levantado dentro de una caldera volcánica, se pudieron medir altas concentraciones de
CO2 y radón en las casas construidas. Varios ejemplos de volcanes que liberan gases y
que, por tanto, implican riesgo para las personas que viven cerca por la polución de
aire, se han encontrado en Centroamérica, donde la prevalencia de fuertes vientos se
combina con la topografía para dirigir la nube a la zona habitada sobre los flancos de
los volcanes. En 1986, en Nicaragua, la gente debió evacuar el área alrededor del volcán
Concepción. La última crisis por emisión de gases en el volcán Masaya en Nicaragua
cesó a principios de los 80, pero este volcán continúa una fase cíclica de liberación de
gases cada 25 años, con severas consecuencias para la agricultura, particularmente para
las plantaciones de café en las faldas del volcán (22). Los efectos del volcán San
Cristóbal, también en Nicaragua, no se han estudiado, pero las nubes de gas pueden
viajar pendiente abajo a zonas pobladas durante algunos días, dependiendo de las
condiciones climáticas. En 1993, durante las erupciones del volcán Kilauea en Hawaii,
se tomaron muestras de gases para descartar una amenaza de alta exposición a SO2 en
la población local. Uno de los ejemplos más intrincados de volcanes liberadores de gas
ocurrió con el Poas en Costa Rica, el cual liberó gases a través de un lago­cráter. Desde

118
1986, el lago ha evaporado cíclicamente a bajo nivel durante sucesivas estaciones secas
y se llenaba nuevamente durante las estaciones lluviosas. Los principales gases en la
nube son: dióxido de carbono, dióxido de azufre, ácido sulfhídrico, ácido clorhídrico y
ácido fluorhídrico, pero las epidemias de compromisos respiratorios en las
comunidades sobre las faldas del volcán y el daño a los cultivos han sido debidas
probablemente a los aerosoles ácidos concentrados que se generan cuando cae el nivel
del lago. Otra materia en partícula fina se forma por las rocas disueltas en las aguas
ácidas del lago y esta materia también se puede introducir en la nube. Durante un
período de varios meses en 1994, la actividad del volcán y la emisión de gases hicieron
un pico y se usó un equipo para monitorizar los niveles de SO2 en la población cercana
a los flancos del volcán.
En la nube, el dióxido de azufre y los aerosoles finos de ácido sulfúrico probablemente
son los componentes más importantes en lo que concierne a la salud respiratoria de los
humanos. La irritación aguda de las vías aéreas puede llevar a efectos dañinos desde la
constricción de pequeñas vías aéreas en adultos sanos (concentraciones en el aire
inspirado de 1­5 ppm por unos pocos minutos) a franca asma entre personas
susceptibles (niveles tan bajos como 200 ppb). Los aerosoles ácidos se pueden generar a
partir de la formación de una burbuja gaseosa en la superficie de los lagos cráter o,
posiblemente, dentro de los cráteres y esos aerosoles pueden evaporarse para formar
finas partículas submicrométricas capaces de viajar grandes distancias en una nube.
Los niveles a los cuales los aerosoles ácidos pueden causar efectos adversos en la salud
son controvertidos. El dióxido de azufre
es un buen marcador cuando es componente de las nubes y ha sido bien estudiado
como contaminante del aire en los países industrializados. Los efectos en la salud
pueden ser causados también por la mezcla de otros componentes en la nube y no debe
darse tanta relevancia solamente a las concentraciones de SO2 como indicador del
riesgo en salud. Todos los volcanes liberadores de gases deben ser activamente
monitorizados, dado que los incrementos súbitos en el flujo de gas pueden ser un aviso
de una nueva y violenta actividad eruptiva. Además, si las concentraciones en el aire
en áreas habitadas exceden rápidamente los estándares de calidad del aire para SO2 de
la Organización Mundial de la Salud (OMS), las comunidades afectadas pueden
necesitar informes sobre las medidas de protección respiratoria o sobre la conveniencia
de la evacuación. El potencial de descargas catastróficas de gases en erupciones
volcánicas fue demostrado en Dieng Plateau, en Java en 1979, cuando 142 personas
murieron mientras intentaban huir de una erupción leve. Aparentemente, estaban
agobiados por una poderosa emisión de CO2 de una fuente a menos de dos kilómetros
arriba, sobre los flancos del volcán. El engañoso riesgo que los gases pueden implicar
fue ilustrado en 1973 en Vestmannaeyjar, en la isla de Heimaey, Islandia, cuando una
erupción a través de una fisura, comenzó sin aviso y la ciudad debió ser evacuada
rápidamente. Los trabajadores salvaron las casas de copiosas precipitaciones de ceniza,
pero estaban acosados por las acumulaciones de gas, particularmente CO2 y por
monóxido de carbono y metano que se filtraban a través del suelo dentro de las
edificaciones. La posibilidad de fisuras y agujeros súbitamente abiertos que liberen gas
de los volcanes en erupción es una amenaza importante que se debe considerar en la
planeación de desastres. Para que el CO2 fluya hacia los valles bajos, debe ciertamente
ser liberado a temperaturas no mucho más altas que las del aire ambiente. Entonces, la
fuente es probablemente un reservorio por debajo del terreno o dentro del volcán. Un

119
dramático ejemplo de liberación masiva de CO2 de un reservorio, en este caso de las
placas del fondo del lago cráter, ocurrió en el lago Nyos, Camerún, el 21 de agosto de
1986 y resultó en la muerte de 1.700 personas (28). Cerca de un cuarto de millón de
toneladas de CO2 fluyó tan lejos como 20 km a lo largo del valle abajo del lago. El área
era una parte montañosa remota al norte de Camerún; en una región densamente
poblada, la carga de muertes habría sido enorme. En 1984, un evento similar mató 37
personas. Ocurrió en el lago Monoun, el cual está situado a sólo 95 km al sudeste del
lago Nyos. La causa de ambos eventos fue quizá un vuelco de las placas profundas en
las cuales se había acumulado lentamente CO2 de las fuentes de soda en el fondo del
lago. Se han hecho sugerencias para liberar de gases los lagos Nyos y Mnoum;
entretanto los dos lagos se están recargando lentamente con dióxido de carbono y
siguen siendo una seria amenaza potencial. Afortunadamente, parece que hay muy
pocos lagos semejantes en el mundo, pero en materia de volcanes, cualquier lago
profundo (200 m o más) se debe considerar como potencialmente riesgoso.
La lluvia ácida no implica un riesgo para la salud de los humanos aunque causa daño a
la vegetación y las cosechas y tiene otros efectos ambientales adversos. La lluvia que
cae a través de la nube de un volcán que libera gases, rápidamente disuelve el HCl,
principal componente de la lluvia ácida volcánica. Las lluvias en el volcán Poas en
Costa Rica o el Masaya en Nicaragua durante sus ciclos de liberación de gas, pueden
tener un pH tan ácido como 2,5­3,5 cuando la gente se queja que la lluvia le irrita los
ojos y la piel. En los países en vías de desarrollo, la lluvia ácida es a menudo recogida
sobre los techos de las láminas metálicas de las casas y se usa como bebida. Los
problemas de salud pueden surgir si la lluvia ácida disuelve metales y tiene alto
contenido de flúor; la última situación podría ocurrir únicamente si la nube contiene
una alta concentración de ácido fluorhídrico. Los aerosoles y la lluvia ácida corroerán
los materiales de maquinaria o de cercas (por ejemplo, alambre de púas) y ataca los
techos galvanizados y las superficies pintadas. En forma interesante, los capullos de las
plantaciones de café parecen particularmente sensibles a la polución del aire a niveles a
los cuales también se presentan los síntomas respiratorios en humanos.
Los flujos de lava de los volcanes son destructivos, pero su poca velocidad permite a
los habitantes evacuar el área afectada con tiempo. Infortunadamente, la gente no
siempre tiene la oportunidad de escapar. En 1977, un lago de lava fluida en
Nyiragongo, Zaire, drenó súbitamente y mató 300 personas (29); en 1994, una
recurrencia potencial de este fenómeno mortal amenazó los campos de refugiados
ruandeses en Goma, Zaire. Las barreras de contención y otros métodos de influjo sobre
la dirección del flujo de lava pueden intentarse para mitigar sus efectos. Uno de los
más interesantes y recientes ejemplos de tal mitigación ocurrió durante la erupción del
monte Etna en 1991­1993, la mayor en tres siglos. La lava amenazaba la villa de
Zefferana pero los ingenieros fueron capaces de desviar el flujo de lava con un canal
artificial y limitar su avance. La posibilidad de una súbita liberación de lava fluida de
una fisura cercana a otro asentamiento también requirió una estrecha monitorización
durante la erupción principal. El inicio de una erupción explosiva puede ser anunciado
por sismos localizados de magnitud 4­5, pero, dado que pueden ser bastante
superficiales, su intensidad puede ser suficiente para colapsar estructuras y amenazar
la vida. La limitada erupción de lava del Etna el 25 de diciembre de 1985, estuvo
acompañada de varios temblores, uno de los cuales destruyó un hotel en la vecindad y
mató una persona. Debe prestarse especial consideración no sólo a las viviendas sino a

120
la posibilidad de colapso de puentes y deslizamientos sobre las vías que podrían
bloquear las rutas de evacuación. Son olas marinas gigantescas producidas por
explosiones y sacudidas subterráneas, capaces de devastar las líneas costeras. La mayor
cantidad de muertes de una erupción en época reciente fue causada por tsunamis
después de la erupción del Krakatoa en 1883, cuando se ahogaron 36.000 personas en
las costas de las cercanas Java y Sumatra. La ocurrencia de un tsunami es impredecible
pero las innovaciones tecnológicas ahora están haciendo posible avisar a las
comunidades costeras del riesgo de uno que se avecina (es decir, uno que ocurriría
como resultado de un maremoto). Otra causa importante de maremotos es el colapso
de la pendiente de un volcán que corre hacia el mar. La importancia de la estabilidad
de las pendientes volcánicas se puso en claro para los vulcanólogos durante la
erupción del Monte Santa Helena en 1980. La erupción se desencadenó por un
terremoto que causó que la inestable pendiente norte cediera y una erupción mayor
siguió a la liberación de presión sobre el magma. Los trabajadores del campo alrededor
de los volcanes en años recientes han confirmado que el colapso de la pendiente no es
un fenómeno raro como se pensaba y muchos volcanes pueden mostrar algún grado de
inestabilidad conforme incrementan su masa con la actividad eruptiva en el tiempo. La
falla masiva de la estructura ha ocurrido cerca de cuatro veces cada siglo durante los
pasados 500 años (31). Cuando el volcán Unzen hizo erupción en Japón en 1792,
desencadenó el colapso del complejo del Monte Mauyama y originó uno de los peores
desastres naturales en Japón (tabla 9.2); la pendiente se deslizó dentro del mar y el
maremoto resultante envió los asentamientos al otro lado de la bahía. Doscientos años
después, surgió la ansiedad de una posible recurrencia de este terrible fenómeno
cuando se reactivó el volcán. Infortunadamente, en la actualidad es imposible predecir
exactamente tales eventos, pero, ciertos volcanes activos que parecen inestables (por
ejemplo, el Calima en México y el San Agustín en Alaska) están siendo estrechamente
vigilados.

Flora del entorno Parque Nacional Nahuel Huapi

El paisaje dominante del parque es el bosque patagónico, que encierran un interés muy
particular por sus afinidades filogenéticas con el Este de Australia, Nueva Zelandia,
Nueva Guinea y otras áreas del lejano oriente (Dimitri 1974) . Esta unidad, junto con la
que continua en la vecina Chile, más vigorosa y diversa, es considerada por varios
biogeógrafos modernos como una biota diferenciada de la región Neotropical,
vinculada a Oceanía, a Antártida y a otros continentes del Gondwana (Brown y
Lomolino 1998).
La distribución de la vegetación y su composición florística responde al juego de
fuerzas modeladores del gradiente local de altitud y precipitaciones.
En la unidad alto­andina la vegetación es semidesértica, con Poa tristigmatica, Luzula
chilensis, Senecio y Nassauvia. En las laderas protegidas del este aparecen especies
hidrófilas como Cortaderia pilosa, Euphrasia meiantha yOurisia alpina. En los cursos
de arroyos y rodeando cuerpos de agua, aparecen prados de gramíneas. Se registran
tres especies alto­andinas endémicas del parque Abrotanella diemii, Senecio
carbonensis y Menonvillea hirsuta, así como especies únicas del sur de los Andes,
como la murtilla, Gaultheria pumila yNassauvia lagascae (Mermoz et al. 2000).

121
Debajo del ambiente alto­andino, el timberline está formado por un bosque,
practicamente monoespecífico, de lenga (Nothofagus pumilio), especie caducifolia que
resiste muy bien las bajas temperaturas de la alta montaña. A medida que disminuye la
elevación la lenga va cambiando de porte, desde un matorral enano, achaparrado y
pegado a las rocas en las zonas más altas (1700 metros), pasando por un porte
arbustivo hasta los 1400 metros, hasta árboles de hasta 20 metros de altura a los entre
1400 y 1000 metros de elevación, en donde se mezcla con el coihue, más vigoroso.
Según Eskuche (1973) el crecimiento achaparrado se produce como respuesta al peso
ejercido por la nieve sobre las ramas. En el límite del bosque la diversidad es muy baja,
con pocas especies acompañando a la lenga: Berberis serratodentata, Rubus geoides,
Empetrum rubrum, Chiliotrichium rosmarinifolium, Pernettya pumila yEscallonia
alpina, entre las más frecuentes. En el sotobosque del bosque de lengas son frecuentes
Drimys winteri, Maytenus disticha y Chusquea coleou. La caña desaparece en las
zonas más altas y es poco frecuente en las laderas orientales, incrementándose la laura
(Schinus patagonicus) y la arvejilla (Vicia nigricans). Entre las herbaceas es común
Osmorrhiza berteroi, Adenocaulon chilense, Macrachaenium gracile, Valeriana
laphatifolia y Alstroemeria aurantiaca (Mermoz y Martín 1987).
A partir de los 1100 metros, en el sector oeste del gradiente de precipitaciones
predominan bosques perennes de coihue (Nothofagus dombeyi) con sotobosques
densos de caña colihue (Chusquea coleou) y un estrato arbustivo denso y variado,
destacándose el michay (Berberis darwini) y la aljaba (Fuchsia magellanica) entre los
más frecuentes. Los principales factores limitantes del bosque de coihues son las bajas
temperaturas y la escasez de humedad (Weinberg 1973) (5). Como tiene raíces muy
superficiales, cercanas a las fuentes de agua, es frecuente que coihues viejos caigan por
el peso de la nieve, prodigando un microambiente de alta diversidad florística y
microfaunística entre sus oquedades. En algunos sitios muy húmedos­ como los
colindantes con Chile­ se forman bosquecillos de arrayán (Luma apiculata), patagua
(Myrceugenia exsucca), palo santo (Dasyphyllum diacanthoides), junto a Saxegothaea
conspicua, Laurelia phillipiana y Flotovia diacanthoides.
En Puerto Blest, sitio de máximas precipitaciones del parque Nacional Nahuel Huapi
(4000 mm. o más), se manifiesta el bosque húmedo valdiviano. El alerce (Fitzroya
cuppresoides) y el Ciprés de las Guaytecas (Pilgerodendron uviferum), reemplazan al
coihue en los pantanos denominados localmente mallines y lo acompañan como co­
dominantes del bosque. El sotobosque típico valdiviano tiene, como en una selva,
plantas trepadoras (Mitraria coccinea eHidrangea intergerrima) y el estrato arbustivo
más diverso del bosque patagónico (Desfontainea spinosa, Azara lanceolata, Pernettya
mucronata, Gaultheria phillearifolia), junto con una gran variedad de musgos,
líquenes, helechos, hongos (Brion et al. 1988), acompañando a la caña coligüe
(Chusquea coleou), de 3 a 4 metros de altura, como especie dominante (Mermoz y
Martin 1987) y a un estrato herbáceo caracterizado por la total ausencia de pastos
densos, con especies como Acaena ovalifolia, Osmorrhiza berteroi, Blechnum
pennamarina y Viola reichei (Montaña 1982; Mermoz y Martín 1987, Monjeau 1989a).
En primavera se destacan plantas nativas como el notro (Embrothrium coccineum), la
mutisia (Mutisia decurrens), la virreina (Mutisia retrusa), y el amancay (Alstroemeria
aurea).
Hacia el este, ya sobre el límite del bosque de transición, y en laderas muy soleadas,
aparecen bosques mixtos de coihue (Nothofagus dombeyi) y de ciprés (Austrocedrus

122
chilensis). Este último se va haciendo dominante a medida que las precipitaciones
disminuyen, confinándose el coihue a las laderas oeste y sur y a las cercanías de los
cursos de agua (Montaña 1982).
Otro tipo de bosques lo constituyen los bosques bajos de ñire (Nothofagus antarctica)
con matorrales altos. Si bien el ñire puede alcanzar los 10 metros, frecuentemente
forma bosques de entre 2 y 5 metros de altura acompañados por la laura (Schinus
patagonicus), el retamo (Diostea juncea), el radal (Lomatia hirsuta) y el maitén
(Maytenus boaria). El sotobosque es variado y diverso y ofrece microhábitats de
elevada heterogeneidad. Son frecuentes densos cañaverales de Chusquea culeou, a
veces altos como el bosque en altura (como en La Veranada), junto a un estrato bajo
Berberis darwini, Berberis buxifolia, Ribes cuculatum, Diostea juncea, las enredaderas
Mutisia spinosa, M. decurrens, y Vicia nigricans, Maytenus chubutensis y Pernettya
poeppigi. Ocupan generalmente fondos de valle y laderas de solana hasta los 1400
metros. El ñire, al ser caducifolio, tiene una alta resistencia a las bajas temperaturas
invernales, sobre todo a las fuertes heladas y vientos fríos que caracterizan a los
ambientes en los que es dominante, caracterizados también por la presencia de suelos
hidromórficos (Weinberg 1973). En la zona sur del Nahuel Huapi ese paisaje está muy
representado, coincidiendo con áreas incendiadas en tiempos pasados (Bayley Willis
1914, Rothkugel 1916).
Una unidad ecológica distribuida en parches, ya que está controlada por la presencia
de suelos hidromórficos de relieve llano y drenaje interrumpido, es la de los mallines
de bosque. Se caracterizan por una vegetación herbácea muy densa y baja, que cubre el
suelo como un césped. Sobre estos dicen Mermoz y Martín (1987): “Predominan las
gramíneas, ciperáceas y juncáceas. Los mallines laterales, algo más elevados y menos
anegados en invierno, permiten el establecimiento de parches arbustivos de Escallonia
virgata, Berberis buxifolia y árboles bajos de Nothofagus antarctica y Pilgerodrendron
uviferum. En altura forman praderas por encima del límite altitudinal del bosque,
insertos en la periferia de los desiertos de altura. Se encuentran asociados a las
cabeceras de cuencas, a orillas de lagunitas de montaña, ocupando zonas llanas o de
baja pendiente que actúan como cubetas de acumulación de los pequeños cursos de
agua que dan origen a los ríos. También abundan gramíneas y ciperáceas, pero estas
vegas de altura suelen tener latífoliadas como Ourisia y compuestas del género
Caltha”. Resulta importante destacar el papel central que juegan estas unidades en la
conservación y regulación del ciclo del agua en el ecosistema andino­patagónico.
En el ecotono bosque­estepa, reconocido como “bosques de transición” por Mermoz et
al. (2000) la limitante fundamental para el desarrollo de la vegetación arbórea está en la
sequía estival, por ello, la distribución de los bosques es insularizada y dependiente de
oportunidades geomorfológicas que se enrarecen hacia el este. Los bosques de lenga
(Nothofagus pumilio) se resguardan de la evotranspiración excesiva en cañadones sur
y este. Los bosquecillos de ñire (Nothofagus antarctica) tienen mayor amplitud
ecológica y forman manchones algo más compactos junto con vegetación de porte
arbustivo (Schinus patagonicus, Berberis spp, Colettia spinosissima) y maitenes
(Maytenus boaria). El coihue (Nothofagus dombeyi) desaparece en el ecotono, junto
con las especies del extremo valdiviano del bosque húmedo. El ciprés (Austrocedrus
chilensis) es el árbol dominante en el límite Este del bosque andino­patagónico, aunque
nunca alcanza a formar una matriz de paisaje (Monjeau 1989a).

123
Con la isohieta de 800 mm. como límite aproximado aparecen las estepas graminosas.
La presencia de una vegetación semidesértica a pesar de la oferta de precipitaciones
relativamente elevadas se explica debido al fuerte período de sequía que coincide con
la primavera y el verano patagónico, lo que resulta en un gran limitante para el
crecimiento de biomasa vegetal. Coironales (pastos) aparecen al norte y al este del
Parque Nacional Nahuel Huapi, entremezclados con parches de estepa arbustiva. Los
coironales puros deFestuca pallescens aparecen cuando las precipitaciones son un poco
mayores, sobre todo en las lomas altas de las estepas colinadas, con precipitaciones
entre 600 y 1000 mm. anuales. La vegetación es monoestratificada y dispersa, con 50%
o más de suelo desnudo. Las especies dominantes son Stipa speciosa, Hordeum
comosum, Bromus macrantus y Poa lanuginosa (Mermoz y Martín 1987, Lores et al.
1984). Los coironales de meseta ocupan las áreas planas en donde se desarrollan altas
velocidades del viento, de efecto desecante. Por esta razón, los bordes de las mesetas
aparecen naturalmente erosionados, formando peladeros en donde predomina una
escasa vegetación graminosa deStipa speciosa var. speciosa y Festuca argentina y
colapiche (Nassauvia glomerulosa), mamuel choique (Adesmia campestris), moye
(Schinus poligamus), y neneo (Mulinum spinosum).
Las estepas arbustivas aparecen donde las precipitaciones son inferiores a los 600 mm.,
y prácticamente no tienen representación como matriz de paisaje en el Parque Nacional
Nahuel Huapi. Son frecuentes Discaria articulata, Berberis buxifolia, Fabiana imbricata,
Schinus patagonicus, Lomatia hirsuta, Maytenus boaria y bosquecillos de ciprés
(Austrocedrus chilensis). En bajos arenosos, donde predomina la acumulación por
sobre la deflación de materiales, aparecen densas matas de neneo (Mulinum spinosum)
con algunos manchones de Stillingia patagonica en el extremo este del Parque (Lores et
al. 1984).
Dentro de la matriz de estepa aparecen dos discontinuidades frecuentes: los roquedales
de la serie Andesítica, característicos de las Sierras y Mesetas Occidentales, y los
mallines de estepa. Los roquedales son sitios de alta biodiversidad relativa, tanto de
flora como de fauna. En ocasiones se asocian con cañadones de altura que presentan
cárcavas con cursos de agua temporarios, aumentando la biodiversidad (Soriano 1956).
Los mallines de estepa son humedales asentados sobre suelos arcillosos. Tienen una
estructura dendrítica que sigue a los fondos de valle aproximadamente planos. Igual
que en una red hidrográfica, el mallín central es el colector de los mallines laterales. La
vegetación está adaptada a inundaciones estacionales en la parte central del mallín,
como Juncus balticus, Taraxacum officinale, Agrostis pirogea, Carex spp., Trifolium
repens y Patia repens. En invierno el centro del mallín se convierte en una laguna,
dificultando el pastoreo nativo y doméstico. Es el sitio de mayor productividad
primaria de la Patagonia extra­andina (Lores et al. 1984). En las partes periféricas, más
altas y estables, aparece el neneo (Mulinum spinosum), el coirón blanco (Festuca
pallescens), la cola de zorro (Hordeum comosum), y el coirón amarillo (Stipa speciosa
var. speciosa). Si el mallín lateral es sobrepastoreado disminuyen las especies
patalables e invade el coirón llama (Stipa chrysophilla).
Entre las especies exóticas que se han asilvestrado e invadido los ambientes naturales
se destacan: la Rosa Mosqueta (Rosa rubiginosa), la Margarita (Chrysanthemum
leucanthemum), el Diente de León (Taraxacum officinale), el Frambueso (Rubus
idaeus), la dedalera (Digitalis purpurea), la achicoria (Cichoriun intybus), la zarzamora
(Rubus ulmifolius), el llantén (Plantago lanceolata), entre otras que suman más de 250

124
especies que, escapadas originariamente de los jardines, ocupan lugares que han sido
alterados por actividades humanas, como la explotación forestal y el pastoreo del
ganado doméstico.

El fenómeno eruptivo del 4 de junio de 2011

Para el período comprendido entre junio de 2010 y marzo de 2011 los reportes del
SERNAGEOMIN­OVDAS respecto a la actividad del Complejo Volcánico Puyehue
Cordón Caulle (CVPCC) mostraban un nivel de alerta Verde Nivel 1 (volcán activo con
comportamiento estable sin riesgo inmediato con un tiempo probable para una
erupción de meses o años). El registro sísmico para dicho período incluye
principalmente sismos asociados a fracturas de rocas a profundidades aproximadas de
10 km.. A partir de agosto de 2010 comenzaron a registrarse sismos en la zona de la
Cordillera Nevada­Cordón Caulle. Incluso en los meses de octubre y noviembre se
registraron sismos relacionados con dinámica de fluidos, hecho repetido durante el
mes de febrero de 2011.
Desde principios de abril de 2011 se registró un incremento en la actividad sísmica
hasta alcanzar un pico máximo el día 19. Ese mismo día se cambió el estado de alerta a
Verde Nivel 2 (volcán activo con comportamiento estable sin riesgo inmediato y con
una probabilidad de erupcionar en meses). En los días siguientes la actividad
disminuyó hasta que el día 26 pobladores de la zona de Paso Samoré reportaron la
presencia de una columna de gases en ascenso. Al realizar el sobrevuelo de la zona
personal de SENAGEOMIN no detectó la fumarola denunciada. El día 27 de abril se
registró en el CVPCC un enjambre sísmico a 4 kilómetros de profundidad que dada su
naturaleza determinó a SERNAGEOMIN a cambiar el alerta a Amarilla Nivel 3 (volcán
activo con cambios en el comportamiento de la actividad con tiempo probable para una
erupción de semanas o meses).
Durante el mes de mayo la actividad sísmica continuó en ascenso, pero a pesar de ello
no se detectaron fenómenos fumarólicos y por lo tanto no se cambió el estado de alerta
desde SERNAGEOMIN aunque se advirtió del desequilibrio del sistema.
El día primero de junio se reportaron cambios notables en la actividad sísmica del
CVPCC registrándose eventos del tipo de largo período e híbridos que llegaron a
incluir 750 eventos en 32 horas. El día dos de junio se registraron 25 sismos por hora y
debido a esta persistencia de la actividad sísmica SERNAGEOMIN cambió el estado de
alerta a Amarillo 4 (volcán activo con cambios del comportamiento de la actividad con
un tiempo probable para una erupción de días semanas). El día tres de junio se registró
un promedio de 60 sismos por hora del tipo de largo período e híbridos. El día sábado
cuatro de junio por la mañana la actividad sísmica de CVPCC evolucionó a un tremor
espasmódico de alta energía registrándose 230 sismos por hora. En ese momento
SERNAGEOMIN dispuso el estado de alerta a Nivel 5 Rojo (inminencia de una
erupción en horas o días).
Según registros de SERNAGEOMIN del día 4 de junio de 2011, a las 14:45 horas
comenzó la erupción. Se registró una explosión y se generó una columna de gases con
una altura de 12 km. y un ancho de 5 km. dispersándose en dirección SE. Ello fue
reportado a las 15:15 hs. cambiándose el alerta a Rojo Nivel 6 Erupción Moderada.
A las 15:30 horas Villa La Angostura fue alcanzada por la nube volcánica que impidió
el paso de la luz solar oscureciendo casi por completo. Minutos antes testigos

125
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128
advirtieron la caída de lapilli de hasta 18 cm. en el sector de Rincón­Totoral­Paso
Samoré, hasta de 5 cm. en el sector de los barrios Tres Cerros­Peumayén­Margaritas, y
de hasta 3 cm. en el sector de los barrios El Once y El Cruce. Dicho material grueso, a lo
largo de la tarde fue acompañado por lapilli fino e intensas descargas eléctricas
provenientes de la nube piroclástica que cubría la zona.

Material precipitado en sector céntrico

Lapili de dimensiones comprendidas entre los 6 cm. y 11 precipitados en área


comprendida entre Lago Correntoso y Lago Espejo Grande

129
Material precipitado en zonas de Brazo Rincón y Lago Totoral

A partir del 12 de junio comenzó a disminuir la actividad descendiendo de 17


sismos/hora a 5. En territorio chileno se detectó la emisión de flujos piroclásticos. La
columna eruptiva varió entre 12 y 3,7 kilómetros. El día 13 la columna eruptiva
ascendió a 8 km. y 5 s/h alcanzando el día 14 una altura de 9 km. y 10 S/H. A partir de
dicha fecha la columna eruptiva osciló entre los 1,5 y 3 km. con oscilaciones en los
meses de septiembre y octubre que incluyeron picos de 10 kilómetros y hasta 27 sismos
por hora pero con baja emanación de material particulado.

Día 4 de junio de 2011, vista del CVPCC desde el noroeste

130
131
Composición de las cenizas mes de julio
Los fragmentos tenían un tamaño entre 0,01 y 0,06 mm. Granulométricamente
corresponden a polvo volcánico y ceniza fina. Están formados de vidrio volcánico de
composición ácida es decir aproximadamente el 70% del total es sílice. Al microscopio
petrográfico se determinaron trizas de vidrio volcánico (vitroclastos) y de cristales de
plagioclasas (silicatos) (cristaloclastos) y fragmentos mixtos (vidrio + cristales). El
vidrio es transparente a translúcido con estrías y formas semilunares y cóncavas. Las
trizas son microvesiculares y dentro de esos huecos se observan microburbujas con
inclusiones que posiblemente corresponden a fluidos y gases volcánicos atrapados
durante la erupción. Las trizas muestran bordes angulosos a muy angulosos lo que las
transforma en un material sumamente abrasivo.
1) El ciclo eruptivo que se inició el día 4 de junio de 2011 en el área del Complejo
Volcánico Puyehue – Cordón Caulle (Chile) continúa hasta el presente si bien con
variaciones diarias mantiene una intensidad de moderada a alta.
2) Estas plumas afectan de diferente forma los sectores por donde se desplazan,
debido a que es distinto el tipo y la cantidad de material que depositan. Cuando la
pluma pierde energía y sustentabilidad a medida que se aleja del centro emisor, en este
caso el volcán Puyehue, los piroclastos transportados por ella “caen” en su mayoría.
3) Por esta razón en los sectores cercanos al volcán (Villa La Angostura, Bariloche etc.)
los espesores acumulados en las etapas iniciales del ciclo eruptivo, alcanzaron hasta 40
cm y el tamaño del material varió entre un aglomerado volcánico (>de32 mm) a un
lapilli (entre 2 y 16 cm).
4) Tal como se observa en esta erupción la caída de material piroclástico constituye el
peligro directo de mayor alcance derivado de una erupción volcánica.
5) La erupción presente del volcán Puyehue iniciada el día 4 de Junio, es, por los
registros geológicos, la erupción de mayor magnitud que afectó el área donde se
ubica Villa La Angostura en tiempos históricos. Así lo confirma tanto el espesor del
material caído como el tamaño de los fragmentos. Es comparable con los registros
geológicos de erupciones acaecidas durante los últimos 10000 años.
6) El material tamaño ceniza y polvo volcánico es de composición ácida es decir, está
compuesta por más de un 70% de sílice.
7) Por definición la ceniza volcánica no es tóxica en su composición. Sin embargo
contiene atrapados en forma de microburbujas gases como el Flúor, Azufre y el Cloro,
que aún en pequeñas concentraciones, al entrar en contacto con el agua reaccionan
formando ácido clorhídrico, sulfhídrico y fluorhídrico. Esta es la razón por lo que
hay que preservar las fuentes de agua potable del contacto con las cenizas.
8) Por su composición rica en sílice, su carácter vítreo y su morfología con puntas
agudas puede afectar el sistema respiratorio, los ojos y la piel.

Por otra parte, la alta tasa de pérdida de humedad del material particulado y el alto
índice de refracción térmica, sumado a la gran cantidad de material forestal caído por
efectos del fenómeno eruptivo, hacen muy elevado el riesgo de ocurrencia de incendios
forestales.

132
Actualmente la ceniza que precipita y se encuentra en suspensión tiene un grano de
alrededor de 10 micrones, los cuales mayormente se alojan en los alvéolos pulmonares
al respirarse sin la adecuada protección de las vías respiratorias.
*Fuente: CONICET y CNEA.­

133
Principales efectos inmediatos en la localidad.

� Escape de alrededor del 20% de la población por vía terrestre hacia otros
centros poblados.­

� Colapso del sistema de provisión de agua potable.­

� Colapso del sistema de suministro eléctrico (distribución).­

� Colapso de edificios y viviendas.­

� Colapso de vías de comunicación.­

� Colapso de vías de suministro de mercaderías y demás abastos.­

� Colapso de sistema de atención hospitalaria.­

� Imposibilidad de navegar y asistir a poblaciones.­

� Imposibilidad de asistir a pobladores de áreas alejadas.­

� Imposibilidad de trasladar pacientes a otros centros hospitalarios.­

� Patrones inusuales (pánico/desesperación) de la población animal,


principalmente animales domésticos.­

� Demanda inmediata de combustible.­

� Escasez de combustible.­

� Escasez de suministros en general.­

Estado de la toma de agua y piletones de filtro lento existentes en el cauce del A° El


Colorado

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137
138
Factores componentes de la alta vulnerabilidad de Villa La Angostura a los eventos
naturales (estudios preliminares)

Breve reseña histórica, marco espacial, social y económico, información base y camino de
los razonamientos adoptados para el manejo de datos particulares de especial interés

Esta demás decir, que el sistema económico de Villa La Angostura


se sustenta en la industria turística, y que mucho del impacto ambiental urbano de la
localidad es absorbido y atenuado por el fenómeno de “aldea de montaña” (¿o ciudad
escondida?) (concepto a mi juicio perfecto para una ciudad que vive de la estética del
marco natural, y totalmente aplicable para una urbanización inmersa entre la
vegetación boscosa), los bosques de las faldas de los Cerros Inacayal, Belvedere y Bayo,
y por el Parque Nacional Nahuel Huapi que la rodea y abriga en todos sus limites. Por
otra parte, el turismo, en franca competencia consigo mismo por la disputa de espacios
y recursos ha impulsado la construcción, que a su vez disparó el crecimiento
poblacional, uno de la mano del otro, y así la demanda habitacional (haciendo un
resumen casi temerario y demasiado simplista, confieso).
Además, ese desarrollo industrial suscitó y aprovechó inventos, así
originando nuevas necesidades. Hoy nos resulta difícil imaginar cómo era la vida sin
electricidad, radio, telefonía fija y móvil, automóvil, aviones, computadoras, Internet…
Pronto nos será difícil pensar lo que podría ser la existencia del hombre sin agua
caliente corriente, alimentos congelados o en conserva… La vida del ciudadano francés
de 1950 no se asemeja en nada a la del de 1910. La vida del ciudadano “angosturense”
de 1980 nada se asemeja a la del de 2008, mucho menos pensar en la del de 1932. La
situación ambiental de Villa La Angostura de 1932 en nada se parece a la de 2008. El
vocabulario pone en evidencia estas transformaciones. La palabra “petróleo” ya no
evoca a la lámpara de cobre sino a la razón no manifiesta para que una superpotencia
mundial invada y arrase una nación bajo el pretexto de la “lucha contra el terrorismo
internacional”.
La construcción de inmuebles y la forma de disponer de los
mismos sufrieron las consecuencias de la evolución tecnológica y sociológica. Estas
nuevas condiciones hacen que nos preguntemos si es prudente dejar la construcción de
viviendas a cargo de la iniciativa privada o si es mejor confiar en las soluciones
dirigistas del Estado.

139
Pero más allá de ése problema, se perfila y nos preocupa otro mucho más grave. ¿Por
qué nuestra sociedad no tiene las habitaciones y viviendas que corresponden, en
cantidad y calidad, a su grado de desarrollo? ¿Por qué tal desproporción ante el
crecimiento explosivo del ejido, los valores del mercado local y los montos de
inversiones realizadas en la zona? Tenemos acceso a toda la tecnología que en nuestro
país se nos puede ofrecer, nos vendemos como “un destino de excelencia”, nos
transformamos en centros de tapa de revistas y demás temas asociados a la vida de la
“alta sociedad argentina”. En las civilizaciones y sociedades primitivas, casi siempre el
número de casas, tiendas o chozas, concuerda con las exigencias de su nivel de vida,
pero Villa La Angostura fracasa en una de sus tareas fundamentales. ¿Será que
confundimos las necesidades reales con una oferta de mercado mucho más cercana a
los deseos de “inversores y mercaderes” que a la realidad misma?
Quizá el problema provenga en parte de la forma en que
promocionamos a nuestra comunidad, de cómo analizamos su economía y como
tazamos sus potencialidades, más cómo padres que miran a sus hijos con los ojos
empañados por la emoción que como planificadores dueños de un pensamiento
analítico y riguroso. Éstas no son más que especulaciones, lo que es real es que no es
más que una de las posibles razones, amén de las fuerzas que accionan y coaccionan en
nuestro medio circundante (gracias a la globalización de la economía mundial parece
no haber lugar a salvo de ella, ni de la “cultura global” y la “desculturalización de los
pueblos”), que seguramente abordaremos más adelante, de nuestro explosivo y
exponencial crecimiento demográfico. Y he aquí uno de los problemas singulares pero
no únicos a la hora de dosificar los recursos y territorio disponibles y hacer con ellos
una proyección en el tiempo.
Villa La Angostura no posee una uniformidad de criterios en su
ámbito social, como tampoco tiene un nivel homogéneo en sus cuadros técnicos e
intelectuales, los distintos componentes poseen no solo conceptos sino fines disímiles;
y así es como se desarrollan asociaciones o grupos y con ellos se puede apreciar la
existencia de vínculos creados a partir no tanto de la empatía o afinidades generales
sino por simples fines e intereses sujetas a los frutos que pudiera generar. Ello implica
más que la existencia de múltiples concepciones, una permanente variabilidad de las
mismas (hasta en las mismas gestiones gubernativas que hasta han mostrado tal
inconsistencia filosófica que han girado ciento ochenta grados su discurso y accionar),
instaurando una constante mutación de las pautas. Igualmente, la disparidad de
conceptos demostrados a través de las sucesivas gestiones de la administración de la
Municipalidad de Villa La Angostura, han establecido usos y costumbres muchas veces
cambiantes y sin una adecuada proyección en el tiempo; así tampoco se han
establecido políticas duraderas y una variable y fugaz seguridad jurídica afectada por
la ausencia de una continuidad del marco legal (ordenanzas y constantes excepciones a
las mismas), los modos de aplicación y la figura (a veces antojadiza) de la excepción a
la norma. Muchos actores sociales, personalidades públicas, personalidades políticas,
en organizaciones civiles, no gubernamentales, comercio e industria consideran aún a
la economía como el motor que debe mover a todo lo demás, haciendo circular riqueza
sin importar las consecuencias. Según su punto de vista, una sociedad debe hacer
elecciones inevitables y difíciles entre conservar o alcanzar una competitividad local
(conservar para mantener su recurso, la vida tal y como la tiene), regional, provincial,
nacional e internacional y disponer de un ambiente equilibrado, sostenible y

140
saludable. En la mayoría de los casos, los hombres hacen lo que “saben” hacer, lo que
les ha enseñado su medio y solo saben de la vida y vivir de cómo y dónde han vivido;
y ello significa un nuevo y muy complejo problema contenido en lo profundo del seno
de la sociedad de esta “nueva” Villa La Angostura; elecciones entre la productividad
de la mano de obra y los lugares de trabajo y condiciones saludables, entre los
impuestos municipales asequibles y las ciudades habitables, entre los ingresos de la
renta y los problemas ambientales y sociales que acarrea, y una multitud de otras
elecciones similares y difíciles. En otras palabras, ellos no confunden crecimiento con
desarrollo únicamente, sino que sólo les parece posible continuar con el desarrollo y la
urbanización guiados en primer término por motivos de mercado y rentabilidad, y
utilizar la riqueza resultante para ayudar a pagar los inevitables costos ambientales y
sociales o simplemente trasladarse en su empleo a un nuevo lugar de residencia.

Hace unos 250 años la humanidad existía en un número


relativamente pequeño y con una tecnología bastante limitada. A los efectos y trazas
comparativas, en el año 1980 la población de Villa La Angostura no superaba los dos
mil habitantes, existía un hotel, dos hosterías, una estación de servicio, tres almacenes,
una panadería, una comisaría, una escuela primaria y una escuela secundaria, un
destacamento de gendarmería, una usina eléctrica que funcionaba con combustible
líquido y un hospital que con esfuerzo podía ser denominado hospital siendo más bien
sala sanitaria con tres profesionales y unos cuatro o cinco enfermeros. Cualquier
perturbación ambiental generalmente estaba dentro de las posibilidades de la misma
naturaleza para absorberla, difícilmente llegando a extremos de saturación. Del mismo
modo que en el planeta a lo largo de los últimos dos siglos, se han producido cambios
y alteraciones, pero han producido e iniciado problemas ambientales que superan los
límites de asimilación de la naturaleza y la sociedad. Primero, un crecimiento explosivo
de la población que ha creado fuertes presiones ambientales y sociales. Segundo, este
crecimiento ha estado acompañado de nuevas

141
industrias, la depresión de otras y ha generado nuevas pautas de consumo de bienes y
servicios. Tercero, el crecimiento poblacional y las nuevas industrias ha provocado un
aumento exacerbado de la urbanización, ejemplo que brinda el hecho de que entre los
años 2004 y 2007 se hayan aprobado en las oficinas municipales pertinentes 222.776
metros cuadrados de edificación, que al día de la fecha, trazando un cuadro de parcelas
vacía y ocupadas en el ejido obtengamos una proporción de ocupación y uso superior
al sesenta por ciento, que prácticamente no queden disponibles lotes y reservas fiscales
ni espacios verdes y que sea muy dificultoso que el habitante acceda libremente a
distintos puntos de la costa del lago o a las faldas de los cerros. Al movimiento de
personas que emigran de pequeños asentamientos a ciudades y pueblos se ha sumado
la emigración proveniente de centros urbanos en los cuales existen serios problemas de
ocupación laboral y pobreza, además del hacinamiento y baja calidad de vida que
proveen los centro de concentración de población en la República Argentina y países
limítrofes.
David Suz uki, el ren omb ra d o gen e tist a y ac tiv ista
ambien tal, emp le ó a las bac teria s para ilu strar la imp osib ilid ad de l
crec imie n to exp on e n cia l con tin uo de la p obla ción , del pr oduc t o brut o d e
las n ac ion e s, de l uso de l os rec urs os y la e n ergía, d e la c on ta min ac ión o,
de h ech o, d e cua lquier cosa que c re zc a con sta n teme n te en prop orci ón a
su ta mañ o y a la s d ime n sion es del esp ac io que ocu pa. Suz uki, en el añ o
1986, sugirió imag in a r un tubo de e n sa yo c on un medio pa ra bac te ria s
en su in teri or: “ A las 11: 0 0 hs. in tr odu cimo s una cé lu la bact er ian a con
un t iempo de duplicación (repro ducción p or sí mi sma) de un min uto . Un
minu to más tard e h ay do s células ba cter ianas, a la s 1 1:02 hs. hay
cu atr o, y así sucesiva ment e hast a que, a las 12: 0 0 h s. el tubo esté lleno.
La pr eg unt a es, ¿a qu é hor a est á e l tubo a la mit ad ? La r e spuesta, desd e
lueg o, es a la s 1 1:59 hs. . Si ust ed fuera u na ba cter ia, ¿ en qué momen to s e
daría cu ent a de que hay u n pr oblema de espacio (o de p oblac ión)? A las
11:58 h s. el tu bo es taría ll eno hast a la cuar ta p ar te, a las 11: 5 7 hs. a un
octav o, et c. . Si una bact eria di jer a a s us co mpañ er as a las 11 : 55 hs.
“creo que tenemos u n p ro blema de espac io”, ser ía el hazm err eír de las
demás: ¡cua lqu ier ba ct er ia sensat a podría v er que el 9 7 % del tu bo
est aba V ACÍ O! No obst ant e, falt ar ía n solo 5 min ut os para qu e el t ubo
quedar a lleno. Suponga a las 1 1:58 h s. algun as células e mpr endedor as
sa li era n del t ubo, r ecor rier an el plan et a en busca de nuevos recur sos, y
regre saran con t r es tu bo s de ensayos co n aliment os. E sto es un ha lla zgo
feno menal, ¡t re s veces las ex ist encia s c onocidas! (¿Se imag ina u st ed
cu ánt o nos t ranqu iliz aría s i hi ci ér amos un ha llaz go de petr óleo d e t a l
mag nit ud?) ¿Cuánto t iempo se g anar ía con eso? A las 1 2: 00 hs. el pr imer
tu bo estar ía ll eno , a las 12:0 1 hs. el segund o tubo qued aría lleno, y a las
12:02 h s., ¡los cu atro est arían h asta el to pe! Al cu adr uplica r la cant idad
de aliment o solo se g anan dos minut os si el creci mi en to co ntin úa a l
mis mo rit mo. ”
El problema que se a n aliz a n o es exclu si vo de V il la La
An gostura . Sin emb arg o, tod a med id a que se adopte e n f orma
apresurada o irresp on sab le sin con side ra r la totalidad de los fac t ore s
que c ompon en la p roblemática po dría r epe rc utir en la suste n tabilida d

142
futura , corrien do e l rie sg o de que la soc ieda d podr ía esta r comen z an do
a en g ullirse ( entr opía ) a sí misma: la in ve rsi ón priva da deman da man o
de ob ra ; esto in cen tiv a la in mig ra ción ; la in migrac ión h ac e au men ta r la
compete n cia en el me rcad o lab ora l y l os sa la ri os se ma n tien en bajos; e l
crec imie n to d e la p oblac i ón pr oduce d ema n da que n o pue de se r
satisfec h a por el Estad o; los bien e s y se rvic ios que o fre ce el me rc ad o
alc an zan prec ios muy e leva d os pa ra e l n ive l de in gre sos de la p obla ción
perma n en te debido a la c ompeten c ia c on e l merc ad o turí st ic o y l a
in versión orie n tada a l me rc ado turís tico se expan de . Así c om o
Arge n tin a vivió un a é poc a de vac as g ord as y h ombres flac os, Vi lla L a
An gostura p odr ía con verge r en un esce n ario de e mpresa rios n o
re sid en tes y turi sta s op ulen tos y pob lac i ón perma n en te c omp uesta p or
dos c lase s s oc ia le s un a en posición muc h o más fa v or able q ue la otra ­
situa da s e n el otro e xtre mo c opian do la situac i ón n acion al con
agrav an tes que s on fruto d e n uestras sin gula re s c aracte rí stica s d e
produc ci ón .
Usualmente, los agentes de inversión, realizan un gran esfuerzo
(ejemplos tales como el pretendido proyecto de “hotel de 1000 plazas”, mutado ya,
proyecto de golf, telecabina y urbanización en tierras del Remanente del Lote Pastoril
11 y urbanización o villa de montaña en centro de esquí Cerro Bayo y Remanente del
Lote Pastoril 15) con el fin de influir sobre la opinión pública quien a su vez influye
sobre los agentes políticos (cuando el esfuerzo de influencia no es más directo) y
organismos de decisión. Este hecho, al igual que la faz negativa de la “promoción
turística”, hace que la población local y de otros sitios desde los cuales pueda tener
acceso a esta información o propaganda sugerida, vea con esperanza y quizá
desmesura sus posibilidades y las que puede brindar Villa La Angostura
particularmente. Esto no solo ocasiona permanentes cambios en los objetivos generales
de una sociedad, sus fines y metodologías, cultura y administración, sino que lleva al
establecimiento de cinturones de pobreza y bolsones de miseria al igual que
asentamientos espontáneos. A lo largo de los últimos años, con la irresistible tentación
de aumentar la renta privada, como los barrios Piedritas, Pehumayén, Margaritas y
Mallín, han ido soportando el peso de proveer de una solución habitacional a la fuerte
presión de la demanda creada con la inmigración sin los recursos suficientes para
adquirir un inmueble en Villa La Angostura. Otro aspecto que ha de ser tenido en
cuenta son las “fluctuaciones y deformaciones” en la economía generadas a partir del
flujo e inyección de inversiones muchas veces pertenecientes a capitales provenientes
de otras “fluctuaciones o deformaciones” de la economía nacional. Ello hace que el día
de hoy, la principal ocupación y fuente de ingresos de la localidad sea la construcción y
actividades relacionadas, estableciendo una economía absolutamente dependiente de
los flujos de inversión y la idea de que “la tierra urbanizable del ejido es infinita”,
concepto absolutamente ajeno a la realidad y al menor análisis.
A simple vista parece ya no haber lugares vacantes, pero ésta no es
más que una sensación. Según los trabajos realizados por la Oficina Técnica Municipal
en los últimos dos años resulta que el 70 % de la tierra dentro del Ejido se encuentra
vacante y sólo el 27,66 % posee edificaciones o proyectos aprobados, es decir, que
únicamente alrededor del 18% de la tierra del Ejido se encuentra construida.

143
Para resolver el problema de la construcción de un número
conveniente de viviendas que respondan a normas modernas, existe un primer grupo
de soluciones: las que apelan a la iniciativa privada. Históricamente son las más
antiguas, pero hay que limitarse a sus formas modernas.
La primera de éstas es el liberalismo, que tuvo su apogeo durante
el siglo XIX, y tras el descontento generado por las experiencias de la economía

dirigida, hoy alcanza una hegemonía casi mundial. Mientras el liberalismo recurre al
individuo, las soluciones como la copropiedad y la cooperación recurren al espíritu de
colaboración y de realización común. Si bien la copropiedad es muy antigua, la
cooperación, en sus formas modernas, no data sino de fines del siglo XIX y se afirma
como un movimiento de proyección mundial.

Laissez faire, laissez passer (Dejad hacer, dejad pasar) fue el lema
invocado contra el antiguo régimen económico de las corporaciones, los monopolios y
los derechos y peajes. Ese lema es además la afirmación de una creencia resueltamente
optimista en un “equilibrio natural de las cosas”. Los economistas liberales dedujeron
la “ley de la oferta y la demanda” según la cual se produce un “equilibrio” en el punto
“óptimo” en que la mayor oferta es satisfecha por la mayor demanda. En el caso que
nos ocupa puede afirmarse que, cuando los alquileres aumentan, resulta ventajoso
construir inmuebles de renta. Pero la aparición en el mercado de un número mayor de
viviendas de alquiler obligaría a los propietarios a disminuir sus pretensiones. En un
pueblo como el nuestro con un crecimiento demográfico explosivo, ello no parece
posible. Quizá esto sea, porque las mayores inversiones apuntan a conformar una

Totales del Ejido

2,66%

27,66% BALDIOS
EDIFICADOS O CON
IRREGULARES
PROYECTOS
APROBADOS

ESPACIOS VERDES Y
70% RESERVAS

144
oferta absolutamente diferente apuntada a un consumidor que no habita en la
localidad y que en ella no posee su fuente de ingresos. Por ejemplo, si en vez de
alquilar a un precio de 1800 $ solo podrán hacerlo a 1000$ u 800$ debido a la
competencia, y si el nuevo precio de 800 $ resulta insuficiente para amortizar
rápidamente el capital invertido en la construcción y el mantenimiento de la misma, los
propietarios dejarán de construir. En el régimen liberal, por consiguiente, la demanda
de viviendas condiciona directamente la oferta y viceversa. El Estado no interviene: no
impone normas, no controla, no autoriza ni subvenciona. El poder público se limita
entonces a asegurar algunos servicios. Se considera que la menor intervención pública
haría peligrar el juego del “equilibrio natural”.
En Francia, después de la liberación, los alquileres de los nuevos
inmuebles fueron declarados totalmente libres, y sus inquilinos sin derecho a
permanecer en la vivienda. Se esperaba que esas medidas habrían de estimular la
construcción de edificios de renta. La experiencia resultó desastrosa. Fueron raros los
propietarios que invirtieron en nuevos inmuebles y los que lo hicieron reclamaron
alquileres equivalentes al sueldo de un ingeniero o el de un dirigente industrial: el
temor a la intervención estatal había secado las fuentes de capitales dispuestas a
invertirse en la edificación, y los pocos que osaron correr el riesgo si se comportaban
como inversores a corto o mediano plazo, pues no querían perder, por esperar
demasiado, el fruto de su operación.
Para que haya construcción en el régimen liberal es necesario,
pues, no sólo que el Estado no intervenga, lo que constituye la condición de dicho
régimen, sino también que no se tema ni se espere su intervención.
Conforme a lo que hemos visto, el régimen liberal, en estado puro,
no es conveniente para una lucha eficaz contra la crisis de vivienda, pues las
inversiones en edificación solo se harán en la medida en que rindan dinero a quienes
las realizan.
Se han hecho otros tipos de críticas a este tipo de solución. Por
ejemplo, se puede decir que el liberalismo descuida el urbanismo, no combate ni la
edificación vetusta ni los inquilinatos. Por ello, atento a este enunciado afirmo que,
si bien la oferta privada se amplía, el Estado no puede evadir la responsabilidad
dejándola en manos de privados, y debe, quizá con mejor suerte que los esfuerzos
realizados con anterioridad, ser el motor de la solución del problema de la vivienda,
cerebro, motor y ejecutor siendo que el pensamiento del Estado es incompatible con
el pensamiento privado, pues difícilmente un funcionario pueda ejercer
correctamente sus obligaciones de Estado pensando como un privado.
Lo antes mencionado en cuanto al régimen liberal en estado puro
y la solución privada del problema de la vivienda, sería equivalente a tomar la doctrina
liberal al pie de la letra, como querían sus iniciadores y como durante tiempo se bogó
en Villa La Angostura. Sin embargo, es posible concebir un régimen que se limite a
exigir el respeto por ciertas normas de construcción y que ordene la demolición de
ciertos inmuebles. Esto lleva a considerar dos desarrollos particulares de la fórmula
liberal y que, sin embargo, ya no corresponden al liberalismo, pues se basan en el
principio de la asociación: la copropiedad y la cooperación.
Dado que la copropiedad establece el dominio absoluto de los
privados, a los fines de atacar la problemática de la vivienda, se hace preferible
poner hincapié en la cooperación y las cooperativas de viviendas con intervención

145
del Estado, con preferencia, nuevamente y dada la experiencia, intervención y
coordinación por parte del Estado.
Yendo un poco más lejos, podemos analizar no únicamente
desde el punto de vista de la conflictividad detectada en las urbanizaciones
realizadas por el Estado, sino por las consecuencias urbanísticas y ambientales
generadas, para afirmar que el Estado politizado ha fracasado escandalosamente
hasta ahora. No pudo estar a la altura de la demanda, siendo sólo el 2,66 % de los
lotes del Ejido espacios verdes y reservas fiscales ha agotado prácticamente tal
recurso, la menguante disposición de fondos a llevado a la entrega de parcelas sin
edificaciones construidas, y así las deudas contraídas por los sectores políticos ha
generado políticas asistenciales descortinadas y fiscalización y controles
absolutamente laxos que han alentado la construcción informal, la formación de un
nodo y cordón interior de pobreza, hacinamiento y riesgo sanitario, altos índices de
riesgo para la población afectada directa e indirectamente dándonos una situación
actual que raya en el caos absoluto. Así y todo, este Estado imperfecto ha dado
respuestas, reconozco no del todo satisfactorias, a sectores de la sociedad que el
mercado ni siquiera nota su existencia. No existió ni existe producto en el mercado
diseñado y verdaderamente asequible para ellos.

De todos modos se reconoce al liberalismo el fundamento de su


llamado a la iniciativa privada. Se ha tratado de conservar dicha iniciativa privada y
sus beneficios, pero buscándoles nuevos campos de acción.
Para librarse del “propietario rapaz” se creyó primero que no
había más que un remedio, convertirse uno mismo en propietario. Tratábase, pues, de
encontrar la forma de construcción o de acceso a la propiedad habitable que permitiría
ser dueño de la vivienda aunque sólo se dispusiera de modestos recursos. Según los
lugares geográficos, se plantearon dos soluciones, la copropiedad y la cooperación.

Hoy más del 30% de la población urbana mundial —1.000 millones de personas— vive en barrios de emergencia, y 90%
de los habitantes de estos barrios de emergencia se encuentran en países en desarrollo.
(Población de los barrios de emergencia como porcentaje de la población urbana de las
regiones en desarrollo)

146
El cálculo de las líneas de pobreza
Los indicadores de la pobreza que utiliza el Banco Mundial para el mundo en
desarrollo en general y para sus principales regiones están basados en dos líneas
internacionales que rondan US$1 y US$2 por día (o, para ser más exactos,
US$32,74 y US$65,48 por mes) a la paridad del poder adquisitivo de 1993. La
línea de US$1 por día representa una definición deliberadamente conservadora de
la pobreza, ya que está fijada en torno a las líneas de pobreza típicas de los
países de bajo ingreso. Lógicamente, el nivel suele ser más alto en los países más
prósperos. No tendría sentido argumentar que hay menos pobres en el mundo si
el cálculo se basa en los niveles que representan pobreza en los países más
pobres. La línea de US$2 por día es más típica de los países de ingreso mediano.
Pero lo ideal es tener en cuenta ambas líneas —e incluso otras— en cada país.
Los cálculos están pensados en función de la coherencia entre todos los
países, ya que la línea internacional de pobreza pretende tener el mismo valor
real en distintos países a lo largo del tiempo. Por eso se convierte a la moneda
local usando el tipo de cambio ajustado según la paridad del poder adquisitivo
para el consumo en 1993 y luego se actualiza en base al último índice oficial de
precios al consumidor. A continuación, se aplican las líneas de pobreza,
expresadas en la moneda local, a los datos oficiales de encuestas sobre el
consumo de los hogares o el ingreso de los particulares representativas de todo el
país a fin de determinar cuántos habitantes se encuentran por debajo de las
líneas de US$1 y US$2.

Una objeción más grave es la que se hace desde el doble punto de


vista social y económico, y es que la copropiedad requiere la disponibilidad de cierta
suma de dinero. Sólo es accesible, pues, a las personas que poseen un mínimo de
copropiedad, hay que dar garantías (ganancia anual bastante elevada, bienes de valor
equivalente o mayor al préstamo) o de que alguien de su aval a favor del prestatario.
Pero si alguien, en el caso de mucha gente, sólo podría ser la colectividad. Es
especialmente el caso de los obreros o empleados y de personas de escasos recursos.
Pero si el Estado o sus organismos dan apoyo financiero, exigirán se les informe sobre
el uso que se le da al dinero. Estas circunstancias explican por qué en Francia, después
de un apogeo debido a las disponibilidades financieras de cierta clase de ganancias, y a
pesar del constante aumento de las rentas después de la Segunda Guerra Mundial, el
contrato de copropiedad no tiene el mismo éxito que antes del año 1955. Por tanto,
volvemos al punto de aquella afirmación anterior de que el Estado no puede delegar la
solución a la demanda de la vivienda y no realizar ningún tipo de regulación,
reglamentación y control más eficiente. Es más aún, argumentar que la División por el
Régimen de Propiedad Horizontal es una forma de bajar costos de mercado y realizar
una oferta a los fines de combatir la demanda y problema de la vivienda no sólo es
falaz, posee una carga de profundo cinismo.
La planificación es una elección entre diversos fines con el
propósito de emplear determinados medios. Esencialmente, es una empresa de un
poder público.
La posibilidad de planificar varía según el objeto: un industrial
puede planificar una producción de sacacorchos, pero no las leyes, decretos y
disposiciones sobre comercio. En los concerniente al hábitat y a la vivienda, su carácter
inmobiliario (podríamos decir inmóvil) exige que su planificación sea efectuada por un
poder con asiento territorial, el Estado, el poder público. Y deberemos entender que
toda acción realizada en forma directa para influir sobre la construcción y la vivienda
no solo influirán sobre la sociedad, sino que hará al hábitat y al medio ambiente.

147
Pero para ello se debe tener un conocimiento minucioso, un auténtico
análisis cuantitativo y cualitativo del ambiente, en cada retícula constituyente. Por
ejemplo, el Sahel es una inmensa región de sabana que rodea el desierto del Sahara por
el sur. Sahel, viene de la palabra árabe “rivera”. Su largo total es de 4550 kilómetros y
tiene de 400 a 500 kilómetros de ancho, extendiéndose dentro de naciones como
Senegal, Gambia, Mauritania, Mali, Burkina Faso, Nigeria y Chad. En él, las
precipitaciones de la “estación de las lluvias” no son muy útiles para la agricultura por
su intensa evaporación. Por ello, el abastecimiento de agua es un problema crucial, y
tienen que bombear “aguas fósiles” pues las precipitaciones no compensan el consumo
generado por los bombeos tradicionales. En Senegal, se utilizan aguas de 30.000 años
de antigüedad, resabios de un “edad glacial”. Por lo tanto, el agua en esta
“descuidada” región del planeta, es un recurso “no renovable”. El agua para el Sahel es
lo que el “territorio”, la “tierra”, es a Villa La Angostura, y su uso ha de ser de
cuidadoso análisis y planificación; en un sitio por no ser renovable, en el otro por no
tener una extensión infinita. El desmanejo en El Sahel trajo devastadoras hambrunas, la
pérdida de cultivos, pasturas, ganado, árboles, generó guerras civiles (muchos de
quienes leen el presente trabajo pueden haber tenido lectura y visto informes en los
medios de difusión sobre la guerra de Darfour), tribales, genocidios y toda la cohorte
de dramas humanos y de angustias que acompañan a las grandes degradaciones de los
equilibrios naturales. Muy lejos de aquella realidad se encuentra Villa La Angostura,
no obstante, de no realizar un adecuado planeamiento ambiental degradaría y
destruiría (o derrocharía para quienes gustan de minimizar las cuestiones o sienten
escozor ante las voces de alarma) su principal y auténtico recurso, la calidad ambiental
de su territorio. Quizá repitiendo inadvertidamente el modelo de la Isla de Pascua que
extinguió su capa forestal y sostuvo una guerra civil que incluyó horrores como el
canibalismo, ella extinguiendo a su vez una de las dos razas humanas y culturas que
cohabitaban la isla; es decir, el modelo solo podía sostener a la mitad de su población.
Un ejemplo menos escalofriante es el del “Dust Bowl” (Tazón de
Polvo), nombre que le aplicó la prensa estadounidense a un sector de las grandes
llanuras de Texas, Arkansas, Oklahoma y Kansas entre otros estados norteamericanos
que, por los años 1930 a 1941, fueran azotadas por una gran sequía y tornados de
polvo. Muchas regiones perdieron entre el 50 y el 95 % de sus pasturas. En algunos
condados de Kansas no hubo cosecha de trigo por casi una década. Pero más allá de
tratarse de un “desastre climático” fue más bien un “desastre del modelo” seguido. La
situación económica posterior a la crisis de 1929 ya había llevado a los granjeros a
elegir soluciones desastrosas para poder sobrevivir. Como el precio del trigo había
bajado a partir de 1930, empezaron a dedicarse a la cría de ganado a la que
consideraban inicialmente más rentables. Pero el pastoreo excesivo, conjugado con el
efecto de la sequía, aceleró aún más la destrucción de la capa vegetal de los suelos. Más
del 60 % de las explotaciones agrícolas eran, por ese entonces, pequeñas granjas
alquiladas, y la mayor parte de los arrendatarios, insolventes, fueron expulsados. La
sequía, el calor y los vientos son un factor innegable, pero solo si se inserta en un marco
que permita entender como aconteció esta catástrofe socioeconómica. Las tierras, desde
fines del siglo XIX habían sido explotadas sin ningún criterio. La destrucción de la
pradera en beneficio de una agricultura torpe volvió demasiado vulnerable la tierra. En
1920, la introducción y uso del tractor intensificó la sobreexplotación de los suelos; y
como sucede con frecuencia en tales situaciones, los remedios fueron peores que la

148
enfermedad. Lo que destruyó los campos y despojó y echó a los granjeros (en el estado
de California, en los tres primeros años, ingresaban 3000 familias por día por esta
razón) no fue la sequía, fue la máquina y detrás de esa apariencia, el modelo de
explotación y el funcionamiento normal del sistema económico de los Estados Unidos.
“A veces, los seres humanos, concientes de mejorar sustancialmente
nuestra relación con el medio ambiente, parecemos comportarnos como esas personas
que salen de viaje para ver con sus propios ojos una ciudad deseada imaginando que
en una cosa real se puede saborear el encanto de lo soñado”, nos recuerda en uno de
sus textos la Licenciada en Economía Lilia Villalobos de la Universidad de México
recordando el texto de Marcel Proust. A diferencia de los personajes descritos por
Marcel Proust, contamos con la infinitamente enorme ventaja de poder ir modificando
la realidad conforme nos adentramos en la búsqueda del objeto de nuestros deseos. Y
siendo concientes de la amplitud de mecanismos interconectados que hacen a nuestro
ambiente, entendemos que es imposible el estudio del medio ambiente desde una sola
disciplina científica ni la planificación ambiental desde un solo enfoque (el urbanístico,
por ejemplo). Sabedores de que este es un empeño multidisciplinar, y en el análisis
económico también tienen mucho que aportar para una mejor comprensión de las
fuentes de muchos problemas ambientales y su eventual solución. La economía, como
ciencia social, introduce a las personas, a la sociedad, en el escenario con su
comportamiento, necesidades y racionalidad.

Los problemas ambientales detectados, existentes y en formación,


tienen una multitud de causas (en el caso del uso y reparto del territorio su génesis se
ubica en el fraccionamiento de las grandes parcelas que conformaban la Colonia
Nahuel Huapi), pero no cabe duda alguna de que la actividad económica de una

149
sociedad mayormente organizada, produciendo, distribuyendo y consumiendo bienes
y servicios, está en el origen o agravamiento de muchos de ellos. En general, no se
trata del resultado de un desconocimiento o de la mala fe; en este último caso se
recomendaría una combinación de investigación, información y sanción y con ello
bastaría. Por el contrario, muchos de los problemas ambientales son el resultado de
una actitud racional por parte de quien los crea. La consecuencia (muchas veces
indeseada, es decir, nunca se meditó a conciencia o no tuvo el peso suficiente para
influir a la hora de la toma de decisiones, que en general es mucho más influida por la
generación rápida de ingresos o un rápido rédito político) de quien intenta resolver un
problema, en ocasiones el de sus propias metas sociales o económicas, o directamente
su subsistencia, utilizando para ello los medios a su alcance, y las restricciones que la
sociedad le impone. Si el problema de base no se resuelve, y es lo suficientemente serio,
difícilmente se detendrá el proceso de deterioro ambiental. Valdría la pena, por tanto,
identificar las variables económicas que condicionan este comportamiento, racional en
si mismo, al fin y al cabo, pero agresivo con el medio, para tratar de cambiar el valor de
algunas de ellas y conseguir que el mismo comportamiento racional permita resolver
los problemas de una forma más aceptable y sostenible en el tiempo.
A pesar de las diferencias notables que desde cualquier perspectiva
podría establecerse entre los diferentes problemas ambientales, en todos ellos tiende a
aparecer un elemento económico común, los agentes involucrados en la degradación
ambiental actúan de la forma en que lo hacen porque no introducen el valor de los
servicios de la biosfera a la vez que lo utilizan. Desde el punto de vista ecológico,
sociológico o climatológico, hasta el punto de vista comercial, significando estos
servicios un plus de valor agregado a la oferta local.
Se trata de poner en la balanza los efectos positivos del uso y
explotación del territorio, pero también los costes de conseguirlos. Si dentro de estos
costes, se computan correctamente los derivados del deterioro ambiental (todo proceso
antrópico conlleva un grado de deterioro), es decir, se toma en cuenta la pérdida de
capacidad del medio para seguir proporcionando su oferta y servicios, tanto a la
generación presente como a las generaciones futuras, y se decide en consecuencia, la
sociedad comenzaría a moverse en la dirección correcta.
Ahora bien, además de un problema de equidad intrageneracional, la
utilización de los recursos ambientales plantea un problema de equidad
intergeneracional., basados en el principio de que todas las personas tienen el mismo
derecho a disfrutar de la oferta y servicios del ambiente y territorio, con independencia
del momento que le toca vivir. A los fines de tratar esta compleja situación, en el
presente escrito abordaré el concepto de la búsqueda de la determinación apropiada de
la “tasa de descuento” para evitar tanto la tiranía presente como la del futuro. La
información relativa a la situación territorial y ambiental, una vez reconocida la
necesidad de contar con ella de la forma más detallada posible, se articula
constantemente alrededor de nuevos indicadores ambientales, que permitirán conectar
la evolución de estos problemas con el objetivo del desarrollo sustentable.
Una vez descubierta la situación preferida por la sociedad en
términos de equilibrio de la calidad ambiental­beneficios de la actividad económica,
quedará la compleja labor de conseguir que la actividad de los agente económicos
individuales sea compatible con los objetivos ambientales y territoriales fijados, algo

150
nada sencillo por tratarse de influir en la actividad de una multitud de agentes
individuales que no actúan en una forma coordinada.
A partir de la caracterización de la situación ambiental, es posible dar un paso más
concreto, abandonar el contexto fundamentalmente estático y adoptar una perspectiva
de análisis dinámica. Es factible, no sólo identificar la aparición de algunos problemas
ambientales en función del nivel de desarrollo de una determinada sociedad o, quizá,
el nivel de consumo generado por ese desarrollo, sino tratar de analizar su previsible
evolución en el tiempo, precisamente, como resultado del camino recorrido en busca
de un mayor grado de desarrollo, y los cambios estructurales que este tránsito trae
consigo. La extensión de los fenómenos de la pobreza y la marginación que los
caracteriza, es uno de los causantes en focos puntuales de nuevos problemas
ambientales, siendo ellos mismos sus principales víctimas. La ruptura con las formas
previamente establecidas y su sustitución por una economía de mercado y consumo
más cruda, ejerce una fuerte presión en el aspecto socioeconómico y una fuerza mucho
más intensa, multiplicada por este, sobre el ambiente. El desarrollo de ciertas pautas
sociales a través de preceptos del mercado de consumo, requiere cada vez más recursos
económicos desarrollándose como demanda pero no bajo la forma de medios. Siendo
lo antes descrito ya no un fenómeno local sino regional, nacional e internacional, uno
de los procesos que genera es el de las migraciones. Tales migraciones, han generado
una virtual explosión demográfica en breve lapso de tiempo sino que así una
urbanización acelerada. Ello, ha venido acompañado de una caracterizada
“informalidad” urbanística, lo que se traduce en la aparición de nuevos focos
conflictivos respecto a la contaminación del agua o la generación de residuos.
Las sociedades ya desarrolladas (aún no dejamos de estar “en vías de
desarrollo”), que ocupan el otro extremo de la escala (solo reservados fragmentos de la
sociedad de nuestro país), el de la riqueza, cuentan tanto con la demanda social, como
con los recursos necesarios para proporcionar a sus ciudadanos un medio ambiente de
mayor calidad. En nuestro caso, el camino más breve y con mayor probabilidades de
éxito es el de minimizar las intervenciones a los fines de la preservación. Para ello, es
necesario cambiar radicalmente el intercambio entre la generación de riqueza y nuestro
medio ambiente.

Ha de agregarse una instancia previa al proceso de planeamiento,


la clarificación del contexto de funcionamiento del plan y el diseño de la estructura del
organismo central y del sistema de planificar. Por ello, el panfletario slogan “Tenemos
un Plan” debería sólo enunciarse a la hora de la autoafirmación, es decir, cuando esta
carta de “intenciones generales” mute en un gran recetario, con un plan de acción,
reacción, proyección y remediación, es decir, un auténtico “master plan”. Revisten
principal importancia las experiencias de las realizaciones concretas en la República
Argentina, han sido muchas veces elementos claves a la discusión en torno a la
metodología de aplicación subsiguiente, ésta define los alcances y tareas del equipo de
planeamiento. “Las decisiones de adoptar el planeamiento no pueden fijarse con
exactitud, ni identificarse como acciones repentinas de gobiernos y municipios. Más
bien las decisiones de planificar forman escalones de gradual progresión en una larga y
dilatada evolución que va desde una sociedad dominada por los principios del
“Laisses faire” (me permito insertar un comentario personal, esto es, creo, los últimos
doce años, más bien hasta estos últimos años en que se ajustaron los mecanismos de

151
control, a pesar de las últimas ordenanzas que procuraron planificar Villa La
Angostura) a otra sociedad que acepta la necesidad de un cierto grado de intervención
por parte del Estado”. (J.B.Mc Loughlin, “Urban and Regional Planning. A system approach,
Londres 1970”)

Tal vez en países con tradición de coherencia interna, plantear este


aspecto de la cuestión puede parecer innecesario; sin embargo, en la Argentina, donde
cada cuatro años, se fabrican o destrozan con absoluta impunidad y despreocupación
organismos de planeamiento, derrochando una alta inversión, discutir el tema es el
primer intento de racionalizar el proceso de toma de decisiones sociales.
Aún partiendo del supuesto básico de la aceptación de la idea de
planeamiento como medio apto para mejorar las condiciones de vida de la población,
queda todavía un amplio campo a las precisiones en cuanto al enfoque, características
y relaciones de los distintos tipos de planeamiento, los medios de implementación
previstos, el medio geográfico, el tiempo de duración del proceso y posibles
derivaciones. La activa y directa ingerencia del “equipo de planeamiento” en todas y
cada una de las etapas del proceso; y una simple coordinación del accionar aislado de
los organismos, pasando por la amplia gama de posibilidades intermedias. Esto
requiere un tiempo propio de maduración y discusión en el cual deberán replantearse
ciertos mecanismos y costumbres administrativas que la rutina o la tradición (o
desidia, irresponsabilidad, falta de compromiso o pereza), “usos y costumbres”
presentan con (aparente) presencia monolítica.
Pero bien, para no planificar y llevar acciones sin meditar lo
suficientemente, o más bien dicho como el buen criollo “no volar tanto sino andar con
los pies bien afirmados en el suelo”, a continuación realicemos una recorrida por el
historial, la crónica de cómo es la evolución histórica de la región, su población, todo
ello a grandes rasgos, y la cronología histórica de las mensuras de división de la tierra
de la zona comprendida por el ejido de Villa La Angostura hasta nuestros días.

Aproximación en forma reducida al poblamiento, fraccionamiento de tierras,


principal infraestructura y cronología de antecedentes históricos de la Colonia

152
Nahuel Huapi, el Parque Nacional Nahuel Huapi y el Ejido Urbano de Villa La
Angostura y contexto histórico general
El presente estudio no intenta establecer un juicio de derechos, ni
busca entablar disputas ni juicios de valor sobre el derecho a dominio ni posesión de la
tierra, simplemente intentaremos trazar los lineamientos de un marco histórico,
político, económico y cultural local, regional y nacional para un mejor y más preciso
análisis. La cronología mencionada comenzaremos a trazarla a grandes rasgos,
poniendo un mayor énfasis en el período comprendido entre la fecha de
descubrimiento del lago Nahuel Huapi hasta el año de aprobación de la mensura de la
Reserva Fiscal del Lote Pastoril 9, ocho años después de la fecha oficial de fundación de
Villa La Angostura, y ocho años antes de que se conforme su Ejido Urbano y alcances
en los lotes pastoriles que hoy conocemos como sus partes integrantes. Acompañamos
las fechas citadas con otras anexadas a los fines de establecer más abarcativamente el
contexto histórico local, regional, nacional y mundial, por tal razón se agregan datos de
obra de infraestructura y algunos sucesos acaecidos en años posteriores a la citada
mensura y fundación y fechas aproximadas de sucesos que en forma directa o indirecta
llevaron a la conformación de la localidad de nuestros días. No es el fin de esta
cronología proveer de un documento histórico absoluto, sino de allanar el camino del
conocimiento del poblamiento general del área comprendida, su evolución, establecer
un marco general de antecedentes históricos, establecer aproximadamente la situación
general del área a la fecha de la formación del ejido urbano y los primeros
fraccionamientos realizados en él. Ello nos permitirá comprender la naturaleza y
destino de los primeros fraccionamientos, la ocupación y uso de los mismos y las
características que se desarrollarán hasta nuestros días fruto de los mismos.
Difícilmente podremos remontarnos al pasado a subsanar y corregir errores, pero sí
podremos establecer un diagnóstico más preciso a los fines de fortalecer y re erigir las
bases del presente y planificar un futuro.­
Las fuentes
La información ha sido extraída de diversas fuentes, libretas de
campo de mensuras procedentes de los archivos de la Dirección General de Tierras y
Geodesia de la Nación archivadas en el Archivo General de la Nación, los trabajos del
historiador Ricardo Vallmitjana, diversos testimonios orales publicados, datos
suministrados por la Dirección General de Estadística y Censos de la Provincia del
Neuquén, Dirección Provincial de Vialidad, obtenidos a través de entrevistas
publicadas por la Biblioteca Osvaldo Bayer, información del II Censo Nacional
Argentino y el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, Inspección General de
Tierras y Colonias de 1909, entrevistas realizadas por quien escribe, del Censo Nacional
Ganadero y apuntes adjuntos, de las publicaciones realizadas por el Sr. Ezequiel
Bustillo, los historiadores locales Conrado Meier y Carlos De Mendieta, información
extraída de los Anales de Parques Nacionales, de la propia pluma de Estanislao
Zeballos, Francisco P. Moreno, M. Alejo Vignati, Enrique Udaondo, Juan Steffen,
Meinrado Hux, Curruhuinca­Roux, Rojas Legarde, Félix Luna, José Luis Romero,
archivos y publicaciones de la Universidad Nacional del Comahue, diversas
publicaciones científicas, archivos de las Direcciones Provincial y Municipal del
Catastro, Archivos Municipales, Museo Histórico de Villa La Angostura, partes del
Ministerio de Guerra, la Universidad de Chile, Gobierno de la Araucania (República de

153
Chile), diversos centros de estudios históricos de la República Argentina, República de
Chile, y muchos otros.­
CRONOLOGÍA
Año 1536
o Entrada en Chile de los españoles a territorio mapuche, a través de la
expedición de Diego de Almagro.
Año 1599
o En Chile acontece la gran batalla entre españoles y mapuches, marca el inicio de
“La Frontera”.
Año 1620
o Juan Fernández, parte de la colonia española de Chile, en busca de los Césares,
descubre el Lago Nahuel Huapi. Encuentra las riberas del lago e islas densamente
pobladas.
o En el período comprendido entre 1620 y 1650, desde los fuertes de Calbuco, los
españoles hacen malocas para capturar esclavos, asolan la región del Nahuel Huapi
pasando por el Paso de Las Lagunas (hoy Pérez Rosales) y de Vuriloche.
Año 1650 (al año 1700)
o Los ganados cimarrones. Hasta el año 1650 el ganado ha ido internándose cada
vez más en la pampa porque se hace poco consumo de él, la salida de cueros al
exterior de la colonia es escasa. A los habitantes de las pampas les resulta más
ventajosa la caza de ganado cimarrón para su sustento que la caza de animales
salvajes propiamente dicho. Por esos años, los aborígenes comienzan a competir con
“las vaquerías”. Cazan ganado vacuno para el propio sustento y comienzan a
comerciar con el excedente de tal consumo, tanto en las Provincias de Córdoba,
Santa Fe y Buenos Aires sino también en Chile, que entonces incluía Cuyo. Para
1650 las exportaciones de cueros aumentaban considerablemente, y las vaquerías
adquieren el carácter de expediciones armadas. Al decrecer y extinguirse el ganado
cimarrón, y aumentar paralelamente los rodeos de estancias, comienza la lucha
entre aborígenes y colonos.
Año 1651
o El reverendo padre Diego Rosales pasa por Nahuel Huapi en su misión de
pacificar a los puelches. Encuentra conviviendo en el lago dos etnias bien
diferenciadas.
Año 1670
o El reverendo padre Mascardi funda la Misión de Nuestra Señora de Nahuel
Huapi en la península Huemul.
Año 1700
o Los mapuches “araucanizan” a los pehuenches.
Año 1703
o El reverendo padre Felipe de La Laguna reestablece la misión de Nahuel Huapi.
Año 1715
o El reverendo padre Juan José Guillelmo se reabre y se pone al frente de la
misión.
Año 1717
o El reverendo padre Elguea reemplaza al asesinado padre Guillelmo.

154
Año 1725
o El proceso de la apropiación de la tierra marcha paralelo al del ganado. Lo
primero se basaba en leyes manejadas por altos funcionarios, lo segundo dependía
en gran parte del Cabildo. De este año en adelante, todas las disposiciones del
Cabildo hablan de “vacunos domésticos o alzados”, no de cimarrones.
Reglaméntase minuciosamente la matanza de ganado con el único fin de hacer
cueros.
Año 1750
o Araucanización de la pampa argentina.
Año 1767
o El Rey Carlos II de España decreta la expatriación de la orden de los Jesuitas de
España y las Indias.
Año 1791
o El reverendo padre Menéndez alcanza por primera vez el Nahuel Huapi, a este
le siguen tres viajes más.
Año 1810
o En Argentina, Revolución de Mayo.
o El médico alemán Franz Joseph Gall publicó el primer volumen de un tratado
sobre el sistema nervioso.
o Napoleón anexionó Holanda a Francia.
Año 1811
o Patriotas chilenos, parlamentan con los mapuches en Concepción.
Año 1814
o En Chile, realistas parlamentan con los mapuches en Arauco.
Año 1816
o Se declara la independencia Argentina.
Año 1820
o “Guerra a muerte” en Chile, en los bandos patriota y realista se suceden las
atrocidades.
o Chollchollinos, boroanos y maquehuanos se trasladan a territorio argentino.
o Ataques a Pergamino y Tandil.
o Se intensifica el tráfico comercial de ganado con Chile.
Año 1826
o Presidente Bernardino Rivadavia. En 1820 habían comenzado los “escarceos
entre las provincias” iniciando la llama de la Guerra Civil, federales y unitarios.
Año 1830
o El Cacique Calfucurá emigra de la araucanía y se instala en Salinas Grandes,
Provincia de Buenos Aires.
o Tratado de paz entre Calfucurá y el Gobierno de Buenos Aires.
Año 1831
o El 31 de agosto de 1830 quedó constituida la Liga, y el 4 de enero de 1831
respondieron las provincias litorales con la firma del Pacto Federal. Eran casi dos
naciones frente a frente.
Año 1835
o Juan Manuel de Rosas en el poder.
Año 1849
o Llega al gobierno de Chile Manuel Montt.

155
o Participación mapuche en la revolución antimonttista del mismo año.
Año 1851
o Calfucurá ataca Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires.
Año 1852
o Urquiza presidente. Dan término las luchas entre Unitarios y Federales.
Año 1853
o Vicente Pérez Rosales funda Puerto Montt.
o Se redacta la Constitución Argentina.
Año 1854
o Guerra permanente en las pampas, triunfos de Yanquetruz y Calfucurá.
Año 1856
o El doctor Francisco Fonck y Fernando Hess cruzan la cordillera por el camino
de Las Lagunas, bautizan al paso Pérez Rosales y llegan hasta la península San
Pedro.
o Tratado entre Argentina y Chile, establece el uti possidetis de 1810.
Año 1859
o Luis Piedra Buena, marino argentino, instala una casa de comercio y puesto en
la Isla Pavón, Santa Cruz.
Año 1861
o Incursión de Oirelle Antoine, autoproclamado “Rey de la Araucanía y
Patagonia”
Año 1862
o En su travesía, Guillermo Cox, atraviesa la zona y navega por la margen sur del
lago Nahuel Huapi naufragando en la confluencia del Limay y el Collón Cura.
o Hasta este año, el gobierno de la Confederación Argentina había realizado
algunos experimentos con colonos a los que aseguraba tierras.
o Mitre presidente de la Argentina.
Año 1864
o En Chile, se aprueban Leyes sobre las tierras de la Frontera.
Año 1865
o Primer Colonia galesa en el Chubut.
o Entre 1865 y 1870 se desarrolla la Guerra de la Triple Alianza.
Año 1867
o El Congreso Nacional argentino promulga la Ley de Conquista del Desierto.
Año 1868
o Sarmiento presidente de la Argentina.
Año 1869
o Al llegar el verano, se inicia la “campaña de exterminio” por parte del ejército
chileno.
o La Ley 340 sanciona el Código Civil redactado por Dalmacio Vélez Sarfield, será
observado como Ley en la República Argentina desde el 1 de enero de 1871.
o Luis Piedra Buena instala un almacén de ramos generales en Punta Arenas,
territorio chileno. Poco tiempo después instala un refugio para náufragos en la Isla
de los Estados.
Año 1870
o En Europa estalla la guerra Franco­Prusiana.

156
o George Musters cruza la patagonia con dos tribus Tehuelches y visita el “País
de las Manzanas”
Año 1871
o Traslado de “arribanos” a las pampas argentinas, batallas con el ejército
argentino.
o En Chile asume el gobierno Federico Errázuriz.
o Levantamiento general de la pampa dirigido por Calfucurá quien ataca la
frontera de Buenos Aires.
Año 1872
o El presidente de los Estados Unidos de Norte América, el General Ulyses M.
Grant, firma el acta de creación del Parque Nacional “Yellowstone Park”, primer
parque­reserva y futuro ejemplo.
o Muere Calfucurá, su hijo Namuncurá jefe de la pampa.
o Se publica el libro “Martín Fierro”.
Año 1874
o Nicolás Avellaneda presidente de la Argentina.
Año 1876
o Francisco P. Moreno contempla desde su ribera sud­este el lago Nahuel Huapi,
es el primer hombre blanco que lo hace partiendo del Océano Atlántico. Visita los
toldos del Cacique Saihueque en “Las Manzanas”.
o El General Roca asume el Ministerio de Guerra en Argentina.
o En Argentina se promulga la Ley de Colonización. El saldo inmigratorio era en
la década de 1860­70 de 76.000 inmigrantes. En la década de 1870­80 fue de 85.000.­
Año 1878
o Chile y Argentina establecen un pacto de límites.
Año 1879
o Las tropas expedicionarias al desierto, al mando del General Julio Roca llegan a
Choele Choel, se conforma la línea militar del Río Negro, millares de pueblos
indígenas han sido desplazados y acorralados en las pampas.
Años 1879­1880
o Segundo viaje de Francisco P. Moreno al Nahuel Huapi.
o Es muerto en persecución por el Ejército Nacional el temido Baigorrita en las
proximidades de la Sierra de Auca Mahuida.
o En Chile, en el mes de septiembre, los mapuche atacan dos veces a la ciudad de
Traiguén y la línea del Malleco. En febrero el ministro Recabarren avanza ocupando
la Araucanía. En marzo se realiza una junta entre 63 caciques.
o El Cacique Manuel Namuncurá, acorralado, se refugia en el interior del
Neuquén, en tierras de Huiliches Manzaneros, con su tío Reuquecurá, hermano de
Calfucurá y del cacique Treuque.
o Julio Argentino Roca presidente de la Argentina.
o El geólogo británico John Milne ideó el primer sismógrafo moderno.
o África continuó siendo repartida entre las potencias europeas. Los borres
proclamaron la independencia de sus repúblicas situadas al norte de los dominios
británicos en Sudáfrica.
Año 1881
o Llegan a las riveras del lago las tropas de la “Expedición al lago Nahuel Huapi”
al mando del General Conrado Villegas. Habían “batido” las faldas de la cordillera,

157
el centro de la hoy Provincia del Neuquén y el sur de este a lo largo de la costa del
río Limay. Culmina la segunda fase de la “Conquista del Desierto”.
o La tribu Curruhuinca se traslada por breve tiempo desde las márgenes del Lago
Lacar al valle de los ríos Traful y Cuyín Manzano.
o El Convenio del 23 de julio, firmado por Francisco Echeverría y Bernardo de
Irigoyen, establece a la Cordillera de los Andes como límite entre Argentina y Chile.
o Comienza el paso masivo de mapuches del lado argentino al chileno.
o Se rematan 55 mil hectáreas en la Araucanía chilena.
o En Chile, epidemia de viruela en Collipulli, se expande por la región.
Año 1882
o El cacique Manuel Namuncurá, los restos de sus guerreros y tribu, y el cacique
Treuque, se ve forzado a escapar a territorio chileno, en la persecución pierde a su
familia que queda atrás en manos del Ejército Nacional.
o En noviembre viajan 18 caciques a Santiago de Chile a hablar con el Presidente.
Se contabilizan cinco delegaciones.
Año 1883
o En Chile se crea la Comisión Repartidora de terrenos indígenas.
o Construcción del Fuerte Chacabuco en las proximidades del Lago Nahuel
Huapi.
o El Teniente Coronel Lino O. Roa opera en el Chubut contra los caciques
Saihueque, Foyel e Inacayal.
Años 1884 y 1885
o Se presentan los caciques Namuncurá (que retorna de Chile), Saihueque, Foyel
y otros, con mujeres y niños, deponiendo las armas.
o El 16 de octubre de 1884, a través de la Ley 1532 se crea el Territorio del
Neuquén, entre otros.
o El Ejército Argentino en nombre del Presidente de la Nación requiere al Cacique
Modesto Inacayal y su tribu que desaloje la zona circundante al Lago Nahuel
Huapi y se traslade al sur para iniciar efectivamente la “Organización de los
Territorios Nacionales que conducirá a la formación de la Colonia Agrícola Nahuel
Huapi.
o En Chile, gran remate de Tierras y reducción de indígenas (hasta 1910).
Año 1885
o Francisco P. Moreno visita al cacique Saihueque que se encontraba prisionero
en los cuarteles del Retiro.
Año 1886
o Presidente Miguel Juárez Celman.
Año 1888
o Por la Convención del 20 de agosto se establecen peritos y comisiones para
demarcar el límite con Chile.
Año 1889
o Jarred Jones se establece en Tequel Malal. Hasta mucho tiempo después utiliza
los mismos corrales que había construido en sus tolderias Modesto Inacayal.
o Se tiene registro de la población Millaqueo, en el Brazo Machete.
o La tribu Antemill habitaba la margen sur del Río Limay, no muy lejos de la
naciente y Loncón, al sur del arroyo Pichi Leofú.
o Calfitrú, Inalef, Nahuelquin y Quelín habitan en Bariloche.

158
o En París, Francia, se pone término a la construcción de la torre Eiffel.
Año 1890
o Inician actividades ganaderas los Sres. Salaberry, Domínguez, Caracol y
Zabaleta.
o Bernardo Azócar, José Tauschek y Federico Ide “descubren” el paso Puyehue.
o Se asientan en la zona sud­este del lago Correntoso y costa este del lago
Nahuel Huapi los Sres. Juan Ignacio Antriao y familia y Juan Bautista Antriao y
familia (según datos existentes de la Dirección General de Tierras archivada en el
Archivo General de la Nación) (No obstante, el ingeniero Rodolfo del Castillo
también utiliza la fecha de 1895).
o En Argentina estalla la revolución. Los revolucionarios fueron neutralizados
por el gobierno. Poco después renuncia el presidente Juárez Celman y asume el
vicepresidente, Carlos Pellegrini.
Año 1891
o Enrique Neil y Alberto Weeks (de nacionalidad estadounidense) inician una
explotación maderera.
o Llegan a Bariloche José Tauschek y su esposa, la primer mujer “blanca” que
habita el lago.
o Quiebran el Banco Nacional y el Banco de la Provincia de Buenos Aires, arrasan
con las reservas de los pequeños ahorristas y destruyen el sistema de crédito.
Año 1892
o Llega a la zona del Río Huemul la familia Barbagelata.
o Luis Sáenz Peña presidente de la Argentina.
o Se tienen datos concretos acerca de una fluida e intensa relación comercial de la
región con establecimientos situados en la vecina República de Chile, el Paso de
Puyehue era intensamente utilizado.
Año 1893
o Se asienta en la zona el Sr. José María Paicil y familia (según datos obtenidos
de archivos de la Dirección General de Tierras en archivo del Archivo General de la
Nación).

Año 1894
o Se coloca el primer hito fronterizo.
o George Newbery y su esposa se instalan al este del lago Traful (Estancia La
Primavera) y años después cerca de Paso Coihue, allí se tiene referencias de que
existe una población Quintriqueo en la zona.
o Carlos Wiederhold y el reverendo padre Domingo Melanesio llegan al lago.
o Se tiene registro del Sr. Jorge Hube en El Rincón, en el valle situado entre el
Lago Totoral y el lago Nahuel Huapi. Allí se asienta también Antonio Millaqueo y
su familia. La tribu Coliqueo y Nazario Lefipán en la zona próxima a Bariloche.
Año 1895
o El Censo Nacional de 1895 acusa un 25 % de extranjeros en el país. Se tiene
registro en la región de 17 personas apellidadas Llanquín, además otras apellidadas
Marin, Pallalef, Loncón, Reuque, Colchagayo (apellido tehuelche), Miguel, Sifuente,
Comegual, Seguel, Oiman, Choza (española) y Cañumil. En el sitio en que se
levanta actualmente San Carlos de Bariloche se registran los apellidos Lefipán,
Quidulef, Curamil, Buenchupan, Ernesto (de 94 años de edad) y Melián.

159
o Carlos Wiederhold abre el establecimiento “San Carlos”, núcleo inicial de la
futura Bariloche.
o Se tiene referencia de la época, en los anales de historia de Parques Nacionales,
de un potrero y corrales de un poblador Cárdenas en la zona de Correntoso. Se
adjunta el nombre de un poblador apellidado Menko.
o Se abre el camino de mulas y carretas que conectaba Llanquihue con Puerto
Blest.
o En San Petesburgo, Rusia, Vladimir Ilich Uliánov empezó a trabajar en un
movimiento para derrocar al Zar. Mientras tanto la guerra chino­japonesa llegó a
su fin.
Año 1896
o Francisco P. Moreno dirige la comisión del Museo de La Plata que, integrada
por Schiorboeck, Bermichan, Wolf, Roth, Soot y Hauthal, investigan la zona.
Registra en las cercanías del actual San Carlos de Bariloche el apellido Huaito.
o En el mes de julio Francisco P. Moreno es designado perito argentino para loa
demarcación de límites.
o Aproximadamente en esta época se establece Juan Antonio Quintupuray
casado con Margarita Treuque y familia en la margen nord­oeste del Lago
Correntoso. Poco tiempo después lo hace la familia formada por el Sr. Juan Torres
casado con Carmen Quintriqueo. En los años próximos, sin datos precisos al
respecto, en la zona del Lago Espejo Chico se asentó la familia Matus y en el Lago
Traful la familia Miranda (según datos existentes en el Archivo General de la
Nación y testimonios de época).
o Se asienta en la Península de Quetrihue, Lote Pastoril 10, Eugenio Quintupuray
y su familia. Comparte la tierra con un poblador de apellido Quintriqueo, esposa e
hijos (según archivos de la Dirección General de Tierras en el Archivo General de la
Nación y lo manifestado en testimonios escritos de la época).
Año 1897
o Carlos Pefaure, primer Juez de Paz de la región.
o Se inicia la ruta de abastos y comercio Nahuel Huapi­Puerto Madryn con carros
tirados por mulas. Igualmente continuará durante varias décadas más el tráfico
comercial con establecimientos de Chile.
o Se tiene registro (en asientos contables), en la estancia Tequel Malal de Jarred
Jones, en el período 1897­1898 de diez asalariados de apellidos indígenas que no
constan asentados en ningún otro registro.
o Se tiene registro del apellido Trangol en la zona de Puerto Manzano y de los
apellidos Colomilla (en Playa Bonita, Bariloche), y Huentrún y los hermanos
Inalef en Las Estacas. También se tiene referencias de la familia Huenúl asentada
en la isla de igual nombre (así denominada en su nombre), y Ranque y Meltre en la
zona de la Península de Quetrihué.
Año 1898
o Julio A. Roca nuevamente presidente de Argentina.
Año 1899
o Se encomienda al ingeniero Carlos E. Martínez la mensura de las tierras que
rodean el lago Nahuel Huapi. Se fracciona en los lotes pastoriles hoy conocidos.
Registra al oeste de la península San Pedro los apellidos Millan y Nahuelquin y en
la zona del Brazo Machete a la familia Cayún.

160
o España, habiendo perdido ya Cuba y Filipinas, vende sus últimas colonias.
Año 1900
o Protocolo firmado por Amancio Alcorta y Carlos Concha Subercaseaux por el
cual Argentina y Chile renuncian a ejecutar acto alguno sobre los territorios en
litigio.
o Desarmado por partes, se lleva de Chile al lago Nahuel Huapi al vapor que se
bautizará “Cóndor”.
o Drasckler (de nacionalidad estadounidense) se establece cerca de Tequel Malal
(Paso Coihue).
Año 1901
o Se tiene registro de la Familia Vargas en la zona.
o Se encuentra mención de tal fecha de los apellidos Paichil, Gatica, Cheuque y
Velásquez en el Traful.
Año 1902
o El 18 de septiembre del año 1902 el presidente Julio A. Roca otorgó por decreto
las parcelas que componían la Colonia Agrícola Nahuel Huapi. Los colones tenían
que cumplir la exigencia de “ocupar directamente de por sí el terreno durante cinco
años continuos, residirá en él levantando una habitación e introduciendo
haciendas que representen por lo menos un capital de 250$” (bastante asequible si
se tiene en cuenta que un caballo de montar valía 25 $. “(…) Se obligará a labrar en
los cinco años por lo menos diez hectáreas y a plantar y cultivar 200 árboles en el
lugar más conveniente”.
o Sir Thomas Holdich, en representación del Reino Unido de la Gran Bretaña,
preside la comisión que, designada para arbitrar en la demarcación de límites,
recorre las zonas en litigio.
o Aarón Anchorena, Carlos Lavallol y Carlos Lamarca, a la postre
adjudicatarios de lotes pastoriles de la Colonia Nahuel Huapi en los que hoy es el
Ejido Urbano de Villa La Angostura, llegan, en carros, desde la costa atlántica en
viaje de turismo.
o El día 2 de febrero se aprueba la mensura realizada en el año 1899 por el
ingeniero Carlos E. Martínez.
o El día 3 de mayo, por Decreto del Poder Ejecutivo Nacional se reservan
cuatrocientas hectáreas de las tierras mensuradas para la fundación de San Carlos.
o El día 3 de mayo, por Decreto del Poder Ejecutivo Nacional se reservan
cuatrocientas hectáreas de las tierras mensuradas para la fundación de San Carlos.
o Se conforma la Colonia Nahuel Huapi.
o El día 18 de septiembre comienza la adjudicación de Lotes Pastoriles en la
Colonia Nahuel Huapi.
o El día 20 de noviembre Eduardo VII de Inglaterra firma el laudo del Tribunal
Arbitral.
o El día 27 de diciembre, el ingeniero Apolinario J. Lucero comienza a deslindar y
dar posesión de los lotes de la Colonia.
Año 1903
o El ingeniero Apolinario J. Lucero informa al Gobierno Nacional de las
dificultades de la Colonia Nahuel Huapi. Entre otras cosas dice que “La población
actual de estos terrenos es bastante numerosa y se compone de indígenas
procedentes de Chile, de Chilenos o Chilotes procedentes del archipiélago de

161
Chiloé y de alemanes que en su mayor parte han venido también de Chile. (…)
los indios como los chilotes se limitan a sembrar el trigo y las papas que
necesitan para su consumo empleándose después como peones a jornal.”

o Llegan al paraje Lago Correntoso Primo Capraro y Federico Baratta.


o El Perito Francisco P. Moreno dona las tres leguas de pago del gobierno
argentino situadas en la zona de la laguna Frías, con destino a conformar un
parque nacional.
o El ingeniero Apolinario J. Lucero fracciona el Lote Pastoril 9 creando la futura
Reserva Fiscal a los fines de fundar en ella un centro urbano similar a San Carlos.
Lo mismo dispone en la zona del Brazo Rincón, sitio en el que habían pobladores
en ese momento.
o Andres Beros llega a la zona y se instala en el puesto de Primo Capraro.
o Se establece en la zona Domingo Coletti.
o El genetista norteamericano Sutton señaló que los cromosomas contenían los
factores genéticos. En Carolina del Norte se realiza el primer vuelo de un
aeroplano, el de los hermanos Wright.
Año 1904
o Se tiene registro de que por esta época, en la zona de la hoy denominada Villa
Llanquín, se realizaba el Camaruco­rogativa religiosa­ a la que asistían de 200 a 300
de personas de origen aborigen. Allí, además, se pactaban trabajos comunitarios
como esquilas a tijera, señaladas o cosechas de alfalfa.
o El Poder Ejecutivo Nacional acepta la donación de Francisco P. Moreno.
o Se forma la Compañía Comercial y Ganadera Chile y Argentina continuadora
de la razón social Hube y Achelis.
Año 1905
o Butch Cassidy y Sundance Kid pasan por Tequel Malal y compran mercaderías
en el “boliche de Jones”.
o Quintana presidente de la Argentina.
o El físico alemán Albert Einstein formula la teoría de la relatividad especial.
Año 1907
o Se amplía el proyectado Parque Nacional del Sur (futuro Parque Nacional
Nahuel Huapi) en cuarenta y tres mil hectáreas.
o Por Ley 5267 se otorga la posesión de la Isla Victoria a Aarón de Anchorena. En
años próximos, las familias Lynch y Uribelarrea adquieren el Lote Pastoril 10, la
Península de Quetrihué. Varios años después Aarón de Anchorena entrega la Isla
Victoria al Gobierno Nacional y compra tierras en las proximidades de la Península
Huemul.
o Primero Capraro delega el cuidado de la Estancia La Belunesse a la familia
Coletti.
Año 1908
o Se instala en la zona del río Ragintuco el Sr. Froilán Monsalve con su familia.

Año 1909
o Se tiene registro del apellido Catalanes en la zona.
o Para 1909 una inspección de Tierras y Colonias determinó que de los 53 Lotes
Pastoriles siete no se habían solicitado y otros tres habían sido abandonados por

162
sus concesionarios. En definitiva, la ocupación efectiva se limitaba a 43 Lotes
Pastoriles y 34 Lotes Agrícolas. En 1909 se incorporaron a las tierras destinadas al
futuro Parque Nacional 65 Lotes Pastoriles libres o abandonados.­
o El 14 % de los adjudicatarios de tierras en la Colonia Agrícola Nahuel Huapi
eran de raíz aborigen. Según la inspección de la Oficina de Tierras y Colonias de
1909, ninguno habitaba en toldos sino en viviendas construidas en general con
características similares, de palo a pique, maderas hachueladas en su cara interior
y techos de tejas de madera. Éstos eran: José María Paicil e Ignacio Antriao (lote 9,
Correntoso), Juan Antonio Quintupuray (fuera de la Colonia, margen nord­oeste
del Lago Correntoso), José María Inalef (lote 102, Lago Gutiérrez), Juan Agustín
Inalef (lote 103, Lago Gutiérrez), Antonio Buenuleo (lote 127, altos de Bariloche),
José María Lleufu (lote 28, Brazo Campanario), Manuela Lemuin (lote 27, Brazo
Campanario), Félix Cheuquepil (lote 60, Bariloche), Manuel Llanquín (Brazo
Campanario), Dorila Millán (lote 7 de Península San Pedro), Cristino Nahuelquin
(lote 8 de Península San Pedro), Luis Nahuelquin (lote 9 de la Península San Pedro)
y Bernardino Huenúl (lote 70, zona del Hotel Amancay, Bariloche). Otros
ocupantes de los “lotes pastoriles” eran en el sector Millaqueo, en el lote 72
Armando Eggers y en el lote 73 Conrado Eggers. En el Brazo Rincón, en el lote 3
Francisco Guananja; en el lote 4 Cesáreo Pérez; en el lote 49 Alfred von Lilienthal
(mejoras adquiridas a Guillermo Tauschek, aparentemente la situación de las
mismas era equivocada, se encontrarían en el lote vecino) y Julio Ernst; y en el lote
6 Jesús López. En el sector Correntoso, en el lote 8 Baratta y Capraro; en el lote 9
José María Paicil e Ignacio Antriao; en el lote 10 no se registra adjudicación
efectiva pero existen referencias de la presencia de Eugenio Quintupuray, en el lote
11 German Hunlich; en el lote 12 German Hunlich; en el lote 13 Carlos Becker
(quien abandona la región en 1920 y cede la posesión del lote 12 a Weeks); en el
lote 14 Ernesto Mermoud; en el lote 15 (Puerto Manzano) Cristian Boock; en el lote
16 Antonio Tierno (arroyo Los Quilquines); en el lote 18 Mariano Perrin y el lote 22
(Las Estacas) propiedad de José Marimón. En el sector del Brazo Huemul, en el lote
38 Manuel Barbagelatta (se denominó Establecimiento Santa Isabel); en el lote 39
José Barbagelatta (se denominó establecimiento Santa María, a principios de los
años 30 se construyó una hostería para turismo); en el lote 40 Pedro Barbagelatta;
en el lote 41 Pablo Mange; y en el lote 43 Justo Jones (Paso Coihue y próximo a
Newbery). En la Isla Victoria Aarón de Anchorena, la península Huemul Marcos M.
Zorrilla (posteriormente lo adquiere Ortiz Basualdo) y en la zona de Tequel Malal
se encuentran Jarred Jones y Drasckler. En el sector de Arroyo del Medio
(Bariloche), en el lote 116 Jacinto Rodríguez; lote 117 Carlos Parsons; lote 118
Ismael Barrientos; lote 119 Pedro Crespo; lote 120 Elisardo Vázquez; lote 121 Luis
Bonefois; lote 122 Rómulo Parsons; lote 123 Hugo Haneck; lote 124 Victoriano
Arriagada; lote 125 Hermann Haneck; lote 126 Guillermo Stock; lote 127 Antonio
Buenuleo; lote 129 Enrique Gingins; lote 130 Hermann Haneck; lote 131 Antonio
Soto; lote 132 Mauricio Haneck; lote 133 Ulises Parsons. En el sector Lego
Gutiérrez, en el lote 96 José Veertbrugghen; lote 102 José María Inalef (desde 1899);
lote 104 Santiago Osterman; lote 105 Francisco Felley; lote 106 Juan Neu; lote 107
Fortunato Arden; lote 108 José Alaniz; lote 109 Juan Riveiro; lote 110 Fernando
Lebeau; lote 103 Juan Inalef. En el sector de la Colonia Suiza; en el lote 83 Camilo
Goye; en el lote 84 Enrique Felley; en el lote 85 Félix Goye; y en el lote 87 Eduardo

163
Goye. En el sector de Playa Bonita; el lote 46 Compañía Comercial y Ganadera
Chile­Argentina; el lote 45 Oscar Runge; el lote 47 Juan de Dios Meza; el lote 43
Baudilio Vallejos; el lote 42 Benito Boock; los lotes 40, 41, 49 y 50 José Luis Pefaure;
el lote 39 Otto Goedecke; el lote 37 Gerardo Zonzunegui, los lotes 38, 52 y 53 los
adquirió Federico Reichelt, contador de la Compañía Comercial y Ganadera Chile­
Argentina; el lote 44 la viuda de Barale, quien luego lo transfirió a Rubén
Fernández y que posteriormente adquirió el Dr. John O´Connor (quién no realizó
mejoras de importancia ya que se volcó a una explotación ganadera en Península
de Quetrihué). Y en el sector comprendido entre Playa Bonita y Llao Llao, en el lote
31 Roberto Guevara; lote 61 Bernardo Boock; lote 28 José María Lleufu; lote 27
Manuela Lemuin; lote 26 Manuel Llanquín; lote 62 José María Bailet; lote 20
Enrique Potthoff; lote 75 Guillermo Kromer; lote 14 Guillermina Kuschell viuda de
Potthoff; lote 13 Onofrio Gómez; lote 1 David Vargas; lote 12 Manuel Vera; lote 11
José Vera; lote 2 Andrés Gómez; lote 3 David Vargas; lote 6 Enrique Ojeda; lote 7
Dorila Millán; lote 8 Cristino Nahuelquin; lote 9 Luis Nahuelquin; lote 10 Otto
Mûhlempfordt; el lote 15 Facundo Alvarado; los lotes 71 y 72 Humberto Giovanelli;
el lote 73 Bernardino Huenúl; el lote 67 (Laguna El Trébol) Otto Dietrich; los lotes
66 y 76 Rodolfo Benroth; el lote 17 Enrique Santa Ana; el lote 60 Félix Cheuquepil;
los lotes 32 y 33 Arnoldo Billicke; los lotes 63 y 74 Zulema Jones; el lote 16 Alfredo
Masias; los lotes 58 y 59 German Stoltbach; y en el lote 70 Juan Masias.
o En Chile estallan los “sucesos de Loncoche y acontece “la matanza de Suto”.
o Se encuentra registro de datos de las poblaciones Chumuy, Carmoney,
Quintana, Ruiz, Barda, Ferreira, Vidal, Ríos, Cuy Cuy, Piman, Chabol (en el lote
49) y Queulo (la últimas cuatro en la zona del Brazo Rincón) en la zona.
o En el mismo año Robert Edwin Peary alcanzó el Polo Norte.
Año 1910
o Llega a la zona Carlos Coletti.
o Comienza el accionar de la Policía Fronteriza. Según testimonios de época, una
auténtica Legión Extranjera por su heterogeneidad.
o Asume la presidencia de Argentina Roque Sáenz Peña.
o El cometa Halley se aproximó a la Tierra en su regreso tras girar alrededor del
sol y su cola envolvió al planeta generando una gran ola de pánico.
Año 1911
o Por Ley Nacional se ordena el enrolamiento general de los ciudadanos. El
registro de las personas será realizado por el estado dejando de hacerlo única y
obligatoriamente la Iglesia.
o Estalla la Revolución Mexicana.
o Se asientan en el Lote Pastoril 49, en la zona de Brazo Rincón, la familia de
Lorenzo Martínez.
Año 1912
o Se asienta en la zona el Sr. Domingo Barría quien había contraído matrimonio
con la Sra. Tránsito Paicil (según información obrante en archivos de la Dirección
General de Tierras en el Archivo General de la Nación).
Año 1913
o Se asientan en la zona de Puerto Manzano los Sres. Pablo Buol y Leonardo
Arduser quienes el mismo año adquieren el Lote Pastoril 15 al Sr. Cristián Bock.

164
También se asienta allí el Sr. José Alvarado (según información obrante en
archivos de la Dirección Nacional de Tierras del Archivo General de la Nación).
Año 1914
o Se instala en la zona próxima a la Península de Puerto Manzano (en el Lote
Pastoril 14) el Sr. Ernesto Mermoud de nacionalidad suiza. Le fue concedido el
Lote Pastoril 14 el 5 de mayo del año 1913 (según información obrante en los
archivos de la Dirección General de Tierras en el Archivo General de la Nación).
o Victorino de la Plaza presidente de Argentina.|
o El Censo Nacional acusa un 30% de extranjeros en el país.
o Estalla en Europa la I Guerra Mundial. Están involucrados Alemania, Gran
Bretaña, Austria, Hungría, Italia, Francia, Bélgica y las colonias asiáticas y
africanas. Más tarde se sumarán Rusia, Turquía y los países árabes que verán la
posibilidad de emanciparse de Turquía.
o Comienza la Misión Salesiana, de manera estable, en San Carlos de Bariloche.
Año 1916
o Hipólito Yrigoyen presidente de Argentina.
o El físico Albert Einstein expresa la teoría general de la relatividad.
Año 1917
o Para tal fecha, “la dilación en la entrega de títulos por parte del Estado
Nacional­no solo a los aborígenes sino a todos los colonos­además del poco
interés por su desenvolvimiento que se evidenciaba en las actitudes de las
autoridades centrales, ponía en duda el futuro del emprendimiento. Así los
esfuerzos y las inversiones se fueron deprimiendo, a la par de que iban surgiendo
numerosas ocupaciones de tierras fiscales, donde muchos se establecían con la
esperanza de que les reconocieran posteriormente sus derechos basados en las
mejoras realizadas”, nos cuenta en sus investigaciones Ricardo Valmitjana. Tal
hecho no era exclusividad de colonos de ninguna nacionalidad ni característica
étnica exclusiva.
o En Rusia estalla la Revolución Rusa.
Año 1918
o Llega a su término la I Guerra Mundial, Europa se encuentra virtualmente
agotada.
Año 1921
o Entre los años 1921 y 1930 la inmigración europea a la Argentina alcanza sus
más altos niveles históricos.
o ­ Se registra erupción volcánica con caída de arena y cenizas de una
coloración gris oscura y fuerte olor a azufre en el aire. Se registró gran mortandad de
peces y animales.
Año 1922
o Decreto firmado por Yrigoyen, establece los límites del Parque Nacional del
Sur. El primer director es el ingeniero Emilio Frey.
o Se establece en “Las Flores” la familia Tierno.
o Llega Marcelo T. De Alvear a la presidencia.
o Se registra un nuevo episodio volcánico pero con la particularidad de que los
pobladores no recuerdan que haya tanto olor a azufre y que la capa de ceniza
caída fue menor al anterior.

165
Año 1924
o Se constituye la Comisión Pro Parque Nacional del Sur. Su primer presidente,
Manuel A. Montes de Oca. En ella están también Horacio Anasagasti, Jorge Mitre,
Aarón de Anchorena, Emilio Frey, Ernesto Jewell, Luís y Fermín Ortiz Basualdo.
o En el mes de mayo se inaugura el primer hospital de Bariloche, éste era una
pequeña vivienda de madera.
o Por aquellos años adquiere la fracción indivisa en la cual se ubica hoy Inalco
la familia García Merú (fracción que será expropiada por el Estado Nacional
durante el primer gobierno del General Juan D. Perón).
Año 1926
o Se establece en Correntoso y alquila el hotel de Primo Capraro el Sr. Willy
Meier y esposa, Dora Meier.
o Se reforma el Código Civil argentino.
Año 1927
o El agrimensor Rodolfo del Castillo realiza la mensura del Lote Pastoril 15,
firman como testigos los Sres. José Alvarado, Feliciano Uribe, Eugenio
Quintupuray, Amalio Soto, José Velásquez y Sebastián Trangol.
o En California, Estados Unidos, Michelson y Morley establecen la medición más
precisa de la velocidad de la luz. Nace la Teoría del Big Bang, la gran explosión
universal primigenia.
Año 1928
o Los bandidos Roberto Foster Rojas, Nicolás Román y Anastasio Puchi asolan la
región.
o Irigoyen nuevamente presidente de la Argentina.
o Alexander Fleming descubre la penicilina.
Año 1929
o Se instala en las cercanías de la costa del Lago Nahuel Huapi próxima al
desagüe del Lago Correntoso el Sr. Belisario Vázquez, viudo, e hijos.
o Decreto que fija el ejido de la Municipalidad de San Carlos de Bariloche.
Año 1930
o Derrocamiento del presidente Hipólito Yrigoyen.
o Se proscribe al partido Radical y gana las elecciones por el “Partido de la
Concordancia” el conservador General Agustín P. Justo.
o Ezequiel Bustillo visita la península Huemul, lote pastoril de propiedad de la
familia Ortiz Basualdo. Lo acompañan Antonio Lynch, Carlos Pacheco
Santamarina, Manuel Uribelarrea y unos días después se suma a ellos Alberto
Peralta Ramos. Poco tiempo antes había pasado por allí el Príncipe de Gales.
o Se establece en las proximidades de El Rincón el Sr. Víctor Pinuer y su esposa
Julia Zumelzu. Residía allí José Diem.
o Se establece Carlos Hensel.
Año 1931
o Ezequiel Bustillo adquiere a la Sucesión de Jorge Newbery el lote pastoril 13 y
al Sr. Alberto Weeks el lote pastoril 12. En el lote pastoril 13 previamente se había
instalado un Sr. Weber de nacionalidad alemana y en el momento de adquirirlo el
Sr. Bustillo habitaba en una fracción del mismo un ciudadano de origen
estadounidense de apellido Walsh.
o Se instala una oficina radio telegráfica.

166
Año 1932
o Se funda en la zona del istmo de la Península de Quetrihué, dentro de la ya
seleccionada fracción del lote pastoril 9 con destino para Reserva Fiscal, el pueblo
de Villa La Angostura (uno de los proyectados por Ezequiel Bustillo dentro del
Parque Nacional recién formado), primeramente bajo el nombre de Presidente
Agustín P. Justo. Firman el acta fundacional los Sres.: Ezequiel Bustillo, Carlos
Pacheco Santamarina, Ernesto Jewell, Antonio Lynch, Emilio Frey, Manuel
Uribelarrea, Rodolfo del Castillo, Horacio Anasagasti, Primo Capraro, Dora
Meier, Erico Koenecke, W. Meier, J. Molinelli, Domingo Varela, Raúl Firpo,
Antonio Uribelarrea, Carlos Hensel, José Olivero, Raúl Alegre, Luis Genta,
Hermann Meier, Ignacio Uranga, Lorenzo Lenzi, Antonio Tierno, José Bianco,
Santiago Castillo, Victoriano Antriao, Ignacio Antriao y se encuentran otras
firmas ilegibles.
o Abre sus puertas la escuela primaria.

Año 1933
o Comisión de Parques Nacionales: Ángel Gallardo, Martín Doello Jurado,
Alonso Baldrich, Víctor Pinto, Casimiro Imbert, Teodoro Sánchez Bustamante,
Ernesto Serigos, Ernesto Jewell, Luis Ortiz Basualdo, Antonio Lynch y Ezequiel
Bustillo.
o Ezequiel Bustillo y Federico Bullrich dan forma a “Cumelén” en los lotes
pastoriles 12 y 13.
o El ingeniero Santucho por Vialidad Nacional da inicio a la construcción del
camino Nahuel Huapi­Correntoso (La actual Ruta Nacional 231). El mismo quedará
bajo la órbita del Parque Nacional implementándose el sistema de camineros,
construyéndose viviendas cada 15 km. aprox. Para albergar a la familia del
encargado de mantener esa porción de camino.
o Hitler se convirtió en canciller de Alemania.

Año 1934
o Llega el ferrocarril a San Carlos de Bariloche.
o La Ley Nacional 12103 crea la Dirección de Parques Nacionales.
o Ezequiel Bustillo es nombrado presidente de Parques Nacionales.

Año 1935
o Realiza la mensura del Lote Pastoril 9, perteneciente a Ignacio Antriao y a la
Sucesión Paicil, el ingeniero Rodolfo del Castillo, ingeniero de la Dirección de
Parques Nacionales.

Año 1937
o Parques Nacionales comienza la venta de parcelas.
o Se inaugura el puente carretero Cipolletti­Neuquén.

Año 1939
o Alemania invade Polonia y estalla la Segunda Guerra Mundial.

Año 1940

167
o El agrimensor Aníbal J. Riccheri realiza el fraccionamiento de la Reserva Fiscal
ubicada en el Lote Pastoril 9 en 94 lotes.

o En años posteriores se encuentra como algunos de los adquirientes de las


parcelas fruto del fraccionamiento de la Reserva Fiscal del Lote Pastoril 9 a los
Sres. Santín (lotes 56, 57, 64, 65, 66, 69 y 70), Waurisch (lote 53), Carlos Hensel (lote
54 “la granja”), Lynch (lotes 67 y 68), Negrette (lote 55), Barbagelata (lotes 5, 6, 13
y 39), Gadi (lote B, primeramente adquirió el lote 27 pero advertido el error en la

168
administración de Parques Nacionales de que el lote tenía un destino prefijado se
le canjeó el lote 27 por el lote B, según testimonio de la propia familia Gadi),
Danecke (lote 14), Elizalde (lote 33), Cromwell (lotes 34, 38, 47 y 71), Serantes
(lotes 47 y 49), Surra Canal (lote 44), Lanari (lote 46), Gándara (lote 43) y Madero
de Demaría Sala (lotes 60, 61, 62 y 63) (Messidor). Los lotes 22 (Parques
Nacionales, casa del guarda parque), lote 23 (usina), lote 1 (Juzgado de Paz), lote 2
(Correo y Oficina Radiotelegráfica), lotes 76 I y II (se destino para Centro Cívico,
abocado a su estudio el arquitecto Estrada), lotes 75 I y II contenían a la Laguna
Calafate, lote 72 (hospital, inaugurado en 1968), lotes 73 y 74 (destinado a,
informalmente y conocido por la tradición oral, reserva para los habitantes de
origen indígena que ocupaban los lotes objeto de reparto; claro ejemplo es la
presencia en esos lotes de los nuevos ocupantes Vidal, Carmoney, Chumuy, por ej.),
lote 27 (capilla) y lote 28 (escuela) tienen destino público. Con posterioridad,
durante el primer gobierno del General Perón, se expropian los lotes 35, 36, 37, 49,
50, 51 y 52 (en ellos encontramos los campamentos de la Universidad de Buenos
Aires y la Universidad de Cuyo). El lote 79, en principio destinado solo a
cementerio (en el mismo se construye un puesto policial, edificio parte integrante
del actual edificio municipal de Calle De Nevares 32), se fracciona en 3 partes, de
una es propietaria la familia Barbagelata, la segunda Primo Capraro y a la tercera
se la destina como cementerio. Todos los adquirientes debían pagar la suma de
5000$ moneda nacional y realizar mejoras y explotación agrícola en ellos dentro de
los primeros cinco años.
o Alemania invade Holanda, Bélgica y Francia. Italia invade Francia y Grecia.
Japón ataca intereses británicos en el pacífico.
o Se produce una gran plaga de ratas en toda la región. Se repetirá en escala
menor unas décadas después.
Año 1941
o Australia y Estados Unidos entran a la Segunda Guerra Mundial.

Año 1943

169
o Los aliados invaden Italia.
Año 1944
o Los Aliados invaden Francia.
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrio actual:
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1944
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1944
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1944
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1944

Año 1945
o En el mes de mayo Alemania se rinde a los aliados. Estados Unidos, por
primera y última vez en la historia hace uso de armas nucleares en contra de seres
humanos, lanza dos ataques nucleares sobre el Japón. Llega a su fin la Segunda
Guerra Mundial.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril propiedad de la Sra.
Angélica Gainza Paz de Sangro en el área del actual barrio:
Lote 11 CRUCE 1945

170
Año 1946
o En el mes de enero se forma la Comisión Vecinal de Villa La Angostura.
o Ascenso en el poder del General Juan D. Perón, asume la presidencia de la
República.

Año 1948
o Se fijan los límites y jurisdicción de Villa La Angostura conformándose su
Ejido Urbano, el mismo contiene 8000 hectáreas.
o El Presidente Perón inicia la política de expropiación de tierras ociosas.
o Se aprueba la Ley Nacional N° 13.512 de Propiedad Horizontal, a los fines de
otorgar la propiedad de las diversas partes de los edificios (conventillos/casas de
inquilinato, mayormente) a sus ocupantes.
o Se realizan las mensuras de división de tierras de propiedad del Sr. Ezequiel
Bustillo en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948
12 Y 13 LAS BALSAS 1948

171
12 Y 13 LAS BALSAS 1948

172
Año 1949
o Se realizan las mensuras de división de tierras de propiedad del Sr. Ezequiel
Bustillo en los lotes pastoriles y barrios actuales:
12 F.DEL BAYO 1949
13 F.DEL BAYO 1949
Año 1950
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 EPULAFQUEN 1950
9 TRES CERROS 1950
11 PIEDRITAS 1950
9 GRAN CRUCE 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
12 LAS BALSAS 1950
9 EPULAFQUEN 1950

173
La mensura correspondiente al lote pastoril 9 en la ubicación relativa de los actuales
barrios epulafquen y tres cerros se realizan en nombre de los Sres. Paicil y Antriao. La
mensura correspondientes al lote 11 a nombre de Angélica Gainza Paz de Sangro y las
mensuras del lote pastoril 12 a nombre de Ezequiel Bustillo.

174
175
176
Año 1951
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 L.CORRENTOSO 1951
13 CUMELEN 1951
13 CUMELEN 1951
9 EPULAFQUEN 1951
11 CRUCE 1951
11 CRUCE 1951
9 GRAN CRUCE 1951
9 L.CORRENTOSO 1951
15 PTO.MANZANO 1951
15 PTO.MANZANO 1951
13 CUMELEN 1951
13 CUMELEN 1951
15 PTO.MANZANO 1951
15 PTO.MANZANO 1951
8 V.CORRENTOSO 1951
8 V.CORRENTOSO 1951
8 V.CORRENTOSO 1951

177
178
179
180
Año 1952
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 CRUCE 1952
9 EPULAFQUEN 1952
11 CRUCE 1952
9 CUMELEN 1952

181
Año 1953
o Se realizan la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
9 CRUCE 1953
Año 1954
� Se registra a partir del mes de julio con una duración aproximada de tres
meses un nuevo episodio volcánico con la erupción del complejo volcánico
Riñinahue­Carrán­Los venados anticipado por sismos de median intensidad,
con gran caída de ceniza volcánica de coloración intensa gris oscura, intenso
olor a azufre tornbando irrespirable el aire, material muy fino muy volátil
que provocó taponamientos de cursos de agua, afectando con mayor
intensidad las márgenes norte de los lagos Correntoso, Espejo y Espejo
Chico, provocando gran mortandad de ganado y peces.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE 1954
12 LAS BALSAS 1954

Año 1955
o Es derrocado (Revolución Libertadora) el presidente, General Juan D. Perón.
Asume la presidencia el General Lonardi. El 13 de noviembre asume la presidencia
el General Aramburu.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
9 CRUCE 1955

182
Año 1956
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
12 LAS BALSAS 1956
9 PEHUMAYEN 1956
9 EPULAFQUEN 1956
9 EPULAFQUEN 1956
9 L.CORRENTOSO 1956
9 L.CORRENTOSO 1956

183
Año 1957
o Por Decreto Nacional N° 10.028/57 se establece la Reglamentación Nacional de
Mensuras, desde la Dirección Nacional del Catastro y Topografía dependiente del
Ministerio de Obras Públicas de la Nación.
o Se realiza la mensura de división de tierras de propiedad de la Sra. Angélica
Gainza Paz de Sangro en el lote pastoril y barrio actual:
11 CRUCE 1957
Año 1958
o El 15 de junio de 1955 se sanciona la Ley N° 14.408 creando la Provincia del
Neuquén, hasta entonces Territorio Nacional. Debido al derrocamiento del
presidente Juan D. Perón, la llamada “Revolución Libertadora”, impondría una
pausa en el proceso de construcción del Estado Provincial. El 1 de mayo de 1958
asumen Ángel Edelman como gobernador y Alfredo Asmar como vice el primer
gobierno democrático de la Provincia del Neuquén.
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrio actual:
12 LAS BALSAS 1958
12 LAS BALSAS 1958
Año 1959
o Triunfa la Revolución Cubana, es derrocado Fulgencio Batista y asume el poder
Fidel Castro.
o El 5 de abril asume la gobernación de la Provincia del Neuquén Alfredo Asmar.
Año 1960

o Terremoto de intensidad aproximada de+ 6 grados en la escala de Richter,


que generó la destrucción de bienes materiales, el hundimiento de costas en el
sector del Lago Nahuel Huapi y mallines, formación de grietas en el suelos
llanos y desplazamientos de masas de agua en el Lago.

o Se desencadena la erupción del complejo volcánico Puyehue­Cordón Caulle


provocando caída de arena (aprox 10 cm) combinada con ceniza de fuerte olor a
azufre.

o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:


11 CRUCE 1960
11 CRUCE 1960
12 CUMELEN 1960
12 CUMELEN 1960
Año 1961
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
11 CRUCE 1961
Año 1962
o El 19 de junio asume la gobernación de la Provincia el Comandante Francisco
Olano.
o La Provincia del Neuquén tenía una tasa de mortalidad infantil del 117,9 por
mil. Las cifras nacionales eran del 62,4 por mil.
Año 1963
o Es electo y asume gobernador de la Provincia del Neuquén Felipe Sapag.

184
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrio actual:
9 EPULAFQUEN 1963
9 TRES CERROS 1963

Año 1964
o En la Provincia del Neuquén se crea el COPADE (Consejo de Planificación y
Acción para el Desarrollo). En 1968 determina en el Plan de Desarrollo Turístico
para Neuquén, en el se establecen prioridades para el desarrollo turístico de las
distintas localidades de la Provincia. En primer término están las localidades de
San Martín de los Andes, Junín de los Andes y Copahue­Caviahue. En segundo
término están las localidades de Aluminé, Neuquén (luego del previsto llenado del
embalse Chocón­Cerros Colorados), Zapala y Villa La Angostura.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
9 EPULAFQUEN 1964

185
Año 1965
o El día veintisiete de octubre del año 1965, la Honorable Legislatura Provincial
del Neuquén aprueba la Ley Provincial N° 485 de División por el Régimen de
Propiedad Horizontal.
Año 1966
o El 29 de junio, el Coronel Alfredo Elizagaray asume la gobernación de la
Provincia.
o El 5 de julio asume la gobernación Rodolfo Rosauer.
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrio actual:
9 EPULAFQUEN 1966
9 EPULAFQUEN 1966
9 EPULAFQUEN 1966
9 EPULAFQUEN 1966
9 EPULAFQUEN 1966

186
187
Año 1967
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrio actual:
12 CUMELEN 1967
12 CUMELEN 1967
12 CUMELEN 1967
12 CUMELEN 1967
o Se inaugura el hospital.
Año 1968
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE 1968
16 PTO.MANZANO 1968
16 PTO.MANZANO 1968
16 PTO.MANZANO 1968
14 CUMELEN 1968
9 TRES CERROS 1968
9 TRES CERROS 1968
9 L.CORRENTOSO 1968
9 TRES CERROS 1968
9 EPULAFQUEN 1968

188
189
Año 1970
o Asume la gobernación, el 3 de marzo, Felipe Sapag.
o En Villa La Angostura habitan 1.114 personas (según datos suministrados por
la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia del Neuquén).
o Se inician las mensuras de afectación de la nueva traza de la Ruta Nacional
231 (Villa La Angostura­Ruta Nacional 237­Bariloche).
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
8 V.CORRENTOSO 1970
8 V.CORRENTOSO 1970
9 CRUCE 1970
12 LAS BALSAS 1970
13 CUMELEN 1970

190
Año 1971
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
22 CALFUCO 1971
8 V.CORRENTOSO 1971

191
Año 1972
o El 22 de julio asume la gobernación el ingeniero Pedro Salvatori.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE 1972
R. Fiscal lote 9 MESSIDOR 1972
R. Fiscal lote 9 MESSIDOR 1972
R. Fiscal lote 9 MESSIDOR 1972
R. Fiscal lote 9 MESSIDOR 1972
9 TRES CERROS 1972
9 TRES CERROS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972
11 PIEDRITAS 1972

192
Año 1973

o Gana las elecciones presidenciales Héctor Cámpora. Poco tiempo después


renuncia y en nuevas elecciones triunfa la fórmula Juan D. Perón­Isabel Martínez
de Perón.
o Gana las elecciones a gobernador Felipe Sapag. Asume el 25 de mayo.
o Inicia sus actividades la Escuela Secundaria, en dependencias de la Escuela
Primaria N° 104.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE­ONCE 1973
13 CUMELEN 1973

Año 1974

193
o Fallece el presidente de la República, Juan D. Perón. Lo sucede la
vicepresidente, Isabel Martínez.
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrios actuales:
11 CRUCE 1974
11 CRUCE 1974
11 EPULAFQUEN 1974
11 PIEDRITAS 1974

Año 1975

o En el mes de noviembre se da comienzo al proyecto definitivo de la traza de la


Ruta Provincial N° 66 (Camino a Cerro Bayo), lo realiza el ingeniero Emilio Molla
para la Dirección de Vialidad Provincial. Existía un estudio de proyecto anterior
realizado por el ingeniero Fonseca.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1975
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1975
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 1975
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 1975
11 ONCE 1975

o Se realiza la obra de cordón cuneta, veredas y pavimento (concreto) de la


Avenida Arrayanes y Nahuel Huapi hasta los puertos de la Villa.
o Se inaugura el nuevo edificio de la Escuela Primaria N° 104 (edificio actual).

194
Año 1976

o El 24 de marzo derroca a Isabel Perón un golpe de estado militar. Asume el


mando la Junta Militar. El General Jorge Rafael Videla es designado para estar al
frente de la Presidencia de la Nación. Se inicia el sangriento “Proceso de
Reorganización Nacional”. Se confía la reestructuración de la economía a Martínez
de Hoz. Se cambia la política cambiaria y nace la “tabla de convertibilidad”.
o El 24 de marzo asume la gobernación de la Provincia el Coronel Eduardo
Santillán.
o El 12 de abril asume la gobernación el Generan Martínez Waldner.
o La Dirección Provincial de Vialidad contrata nuevamente a Emilio Molla para
hacer el replanteo de la traza de la Ruta N° 66 y se comienza la obra que se finaliza
un año después.
o Comienza a construirse el Centro de Esquí Cerro Bayo.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
8 ARAUCO 1976

195
Año 1977

o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:


11 CRUCE 1977
9 CRUCE 1977
11 PIEDRITAS 1977

Año 1978­1979

o Registro de una Erupción en el Volcán Carrán con presencia, en la localidad de


Villa la Angostura, de sismo de mediana intensidad que y caída cenizas durante
aproximadamente doce (12) horas. Durante dichas precipitaciones se acumuló un
total de cinco (5) milímetros (mm) a tres (3) centímetros (cm). Con la posterior
precipitación de lluvias y la presencia de viento la capa de material piroclástico

196
fue rápidamente removida (comparativamente con las experiencias anteriores y
actual) de la zona de Villa la Angostura.

o En el marco del diferendo limítrofe con la República de Chile por el Canal de


Beagle, los países están al borde de la guerra. Villa La Angostura es ocupada ese
verano por tropas, artillería y tanques del Ejército Argentino considerándose
“frente de guerra”.
o El 12 de diciembre asume la gobernación de la Provincia el General Domingo
Trimarco.
o Asume al frente de la Comisión de Fomento de Villa La Angostura Eduardo
Hensel.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 ONCE 1978
11 CRUCE 1978
9 NORTE 1978
8 ARAUCO 1978

Año 1980
o En Villa La Angostura, se aprueba la ordenanza 88/90 que intenta fijar
indicadores urbanísticos y para la división del suelo.
o En Villa La Angostura habitan 1.759 personas (Según datos suministrados por
la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia del Neuquén).
o Se determina la traza que seguirá el “Desvío de Tránsito Pesado” (Camino de
Circunvalación).
o La Provincia del Neuquén tenía una tasa de mortalidad infantil del 32,5 por mil.
Las cifras nacionales eran del 33,2 por mil.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
11 CRUCE 1980

197
Año 1981
o El General Roberto Viola asume en reemplazo del General Videla. A fin de año
es reemplazado por el General Leopoldo Fortunato Galtieri.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
R. Fiscal lote 9 HOSPITAL 1981
11 PIEDRITAS 1981

Año 1982
o Se construye el Gimnasio Municipal en el Barrio Once.
o Villa La Angostura deja de ser Comisión de Fomento pasando a la categoría de
Municipalidad de tercera.

198
o El 2 de abril Argentina invade las Islas Malvinas y recupera la posesión de las
islas. En el mes de junio las fuerzas armadas argentinas se ven forzadas a rendirse
ante las fuerzas armadas británicas.
o Después de la derrota militar de las Islas Malvinas el presidente de facto
General Galtieri dimite y asume el General Bignone.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
R. Fiscal lote 9 HOSPITAL 1982

Año 1983
o El presidente de facto Bignone llama a elecciones. La fórmula vencedora es la
radical Alfonsín­Martínez.
o El 10 de diciembre asume la presidencia el Dr. Raúl Alfonsín. Se intentará
reestructurar nuevamente la economía argentina, nace el plan austral y se devalúa
el peso ley naciendo los “australes” como nueva moneda nacional.
o En Villa La Angostura asume la intendencia Marino Simbeni.
o Asume el gobierno de la Provincia del Neuquén Felipe Sapag.
o Se realizan las mensuras de división en el lote pastoril y barrios actuales:
9 CRUCE 1983
9 L.CORRENTOSO 1983
9 NORTE SUR 1983
o Se realiza la continuación de la calle Calafate hasta alcanzar la avenida
Nahuel Huapi.

Año 1984
o Se une la calle Las Retamas a través de un puente­alcantarilla sobre el Arroyo
Las Piedritas.
o Se hace entrega de las viviendas del Barrio FoNaVi (Barrio Calafate).

199
Año 1985
o Se realiza la última mensura de afectación de la traza de la Ruta Nacional 231.
o Se inaugura y comienza sus actividades la UAF (Unidad de Acción Familiar,
dependiente del Ministerio de Bienestar Social del Neuquén).
o La Cooperativa del Agua de Villa La Angostura, con un préstamo del Banco
Interamericano de Desarrollo construye la red de agua potable de los barrios
Piedritas, Cruce y Once, construye las cisternas de agua de barrio Cementerio y
Lomas del Correntoso y el Filtro Lento.
o Se inician las obras de la nueva ruta que une a Villa La Angostura con la Ruta
Nacional 237 y San Carlos de Bariloche. La misma comprende un cambio de traza,
obras de arte y asfalto.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
22 CALFUCO 1985
11 ONCE 1985
11 PIEDRITAS 1985
R. Fiscal lote 9 CALAFATE 1985
9 CRUCE 1985

200
9 CRUCE 1985
11 PIEDRITAS 1985

o Retorna en su derrotero por el espacio el cometa Halley, en esta oportunidad es


estudiado con sondas espaciales y telescopios.

201
Año 1986
o Se inician las obras de construcción del nuevo puente de hormigón sobre el Río
Correntoso.
o Debido a la renuncia del intendente, asume la intendencia interina la Sra.
Marga Moure.
o Se realiza la mensura de división en el lote pastoril y barrio actual:
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 1986
o Se incendia la Estación de Servicio del ACA, queda parcialmente destruida. Se
reconstruirá años después.
Año 1987
o Es electo gobernador de la Provincia el Ingeniero Pedro Salvatori.
o Se inaugura la Escuela Primaria N° 186.
o Se inaugura el nuevo edificio del Centro Provincial de Enseñanza Media N° 17,
este antes funcionaba en la Escuela N° 104.
o Se inaugura el primer edificio exclusivo para Jardín de Infantes.
o Se inaugura la nueva usina eléctrica (la única de la actualidad).

202
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE 1987
15 PTO.MANZANO 1987
9 CRUCE 1987
9 CRUCE 1987
9 EPULAFQUEN 1987
9 EPULAFQUEN 1987
9 NORTE SUR 1987

Año 1988
o Se da forma a la ordenanza de planeamiento y edificación 314/88, la misma
entra en vigencia en el mes de enero de 1989.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 ONCE 1988
11 CRUCE 1988
11 CRUCE 1988
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 1988
9 CRUCE 1988
11 ONCE 1988
12 F.DEL BAYO 1988
11 CRUCE 1988
11 ONCE 1988
11 ONCE 1988
9 L.CORRENTOSO 1988
o Un voraz incendio destruye el Concejo Deliberante y se quema parte del archivo
municipal.
Año 1989
o Es electo presidente el Dr. Carlos Menem. Ante la ola de saqueos y que la
economía argentina se había vuelto virtualmente inmanejable (hiperinflación) el
Dr. Raúl Alfonsín realiza un traspaso de poder anticipado.

203
o Cae el “Muro de Berlín” y hay señales inequívocas del comienzo del colapso de
la Unión Soviética.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1989
9 NORTE 1989
11 CRUCE 1989
11 PIEDRITAS 1989
11 CRUCE 1989
8 V.CORRENTOSO 1989
11 CRUCE 1989
21 L.GUACHA 1989
9 EPULAFQUEN 1989
11 ONCE 1989

Año 1990
o Es devaluada nuevamente la moneda nacional, nace el peso argentino con la
conversión de un peso por un dólar.
o Se construye la ampliación del Hospital Oscar Arráiz.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 ONCE 1990
9 L.CORRENTOSO 1990
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 1990
11 CRUCE 1990
11 ONCE 1990
21 Loma GUACHA 1990
12 CUMELEN 1990
Año 1991
o Es electo gobernador de la Provincia el Sr. Jorge Sobisch.
o Asume la Intendencia de Villa La Angostura el Sr. Mariano Barría.
o En Villa La Angostura habitan 3.522 personas (según datos suministrados por
la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia del Neuquén).
o Se finaliza la obra del último tramo restante de la Ruta Nacional 231 (Villa La
Angostura­Ruta Nacional 237­Bariloche), se cuenta con un camino asfaltado.

204
o Se fragmenta finalmente la Unión Soviética. Se puede declarar el comienzo de
“la globalización” de la economía, cultura y mercado mundial.
o Irak invade Kuwait y es expulsado tras una feroz contienda por el ejército de los
Estados Unidos y otros países de la OTAN como Francia y Gran Bretaña; es el
nuevo perfil del mundo.
o La Provincia del Neuquén tenía una tasa de mortalidad infantil del 15,9 por mil.
La cifra nacional era del 23,9 por mil.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 CRUCE 1991
9 EPULAFQUEN 1991
11 CRUCE 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 PEHUMAYEN 1991
9 NORTE 1991
9 NORTE 1991
11 ONCE 1991
R. Fiscal lote 9 INACAYAL 1991
o Se produce el primer atentado terrorista islámico en territorio argentino. Un
coche­bomba destruye la embajada de Israel en la Capital Federal.

Año 1992
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 NORTE 1992
11 CRUCE 1992
9 GRAN CRUCE 1992
11 PIEDRITAS 1992
9 GRAN CRUCE 1992
11 PIEDRITAS 1992

205
11 ONCE 1992

Año 1993
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 1993
11 CRUCE 1993
8 V.CORRENTOSO 1993
8 BANDURRIAS 1993
9 NORTE 1993
11 CRUCE 1993
11 ONCE 1993
9 EPULAFQUEN 1993
9 NORTE 1993

206
Año 1994
o Llega el ducto de gas natural a Villa La Angostura. Comienzan los trabajos
para realizar la red de gas de la localidad.
o Es reelecto presidente el Dr. Carlos Menem.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 ONCE 1994
13 CUMELEN 1994
9 L.CORRENTOSO 1994
8 V.CORRENTOSO 1994
12 LAS BALSAS 1994

207
11 CRUCE 1994
11 CRUCE 1994
9 NORTE 1994

o Se produce el segundo atentado islámico en la República Argentina. Un coche­


bomba destruye el edificio de la Amia en la Capital Federal.

Año 1995
o Hasta que se expida el Colegio Electoral, el Gobierno de la Provincia del
Neuquén ordena la intervención de la Municipalidad de Villa La Angostura. Es
designada interventora la concejal Julia Diez.
o Es electo intendente el Dr. Hugo Panessi.
o Se construye la red de agua del barrio Epulafquen. En años inmediatamente
posteriores se construirá la Escuela Primaria N° 341.
o Es electo gobernador de la Provincia Felipe Sapag.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 EPULAFQUEN 1995
9 NORTE SUR 1995
11 ONCE 1995
11 PIEDRITAS 1995
9 INACAYAL 1995
o Se registran fuertes nevadas. En el mes de julio se registra una precipitación
nívea que alcanza y supera en algunos sectores los 80 centímetros de profundidad.

Año 1996
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 EPULAFQUEN 1996
11 ONCE 1996
11 ONCE 1996
9 TRES CERROS 1996
11 ONCE 1996
11 CRUCE 1996

208
9 L.CORRENTOSO 1996
9 CRUCE 1996
11 C.CHICO 1996

Año 1997
o La tasa de mortalidad infantil en la Provincia del Neuquén llegó al 1,3 por mil.
o El delegado local del Instituto Provincial de la Vivienda y Urbanismo del
Neuquén contrata al Agrimensor Bretón a los fines de mensurar los actuales
Barrios Mallín y Margaritas y comienza su ordenamiento. Meses después es
reemplazado interrumpiendo el proceso.
o A la fecha, la situación sanitaria y edilicia de los barrios mencionados es
absolutamente dramática, con problemas sociales gravísimos. Con una población
que ronda las 5000 personas, sin cloacas, sobreedificado y con todos los usos
urbanos del suelo en práctica, comprende un complejo socio económico con ritmos
y fuerza propios, constituyendo no un cinturón como en la mayoría de las ciudades
desarrolladas sino un cordón interior independiente. Dicho cordón se caracteriza
por condiciones económicas, culturales, familiares, procedencias, densidad
constructiva, densidad demográfica, situación fito sanitaria y conflictos sociales
muy diferenciados respecto a las urbanizaciones circundantes. Dichos barrios
concentrados sobre una misma cuenca, la de la laguna Calafate, reuniendo los
aportes líquidos de los barrios Pinar, Cementerio, Margaritas norte, Pehumayén y
Tres Cerros Sur, comparten una grave situación.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 L.CORRENTOSO 1997
11 CRUCE 1997
R. Fiscal lote 9 ANTIL HUE 1997
11 ONCE 1997
11 CRUCE 1997
11 ONCE 1997
11 ONCE 1997
11 ONCE 1997
11 CRUCE 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997

209
R. Fiscal lote 9 MALLIN 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1997
9 L.CORRENTOSO 1997
11 ONCE 1997
9 CRUCE 1997
9 CRUCE 1997
9 EPULAFQUEN 1997
9 EPULAFQUEN 1997
9 EPULAFQUEN 1997
9 L.CORRENTOSO 1997

210
211
Año 1998
o Es electo presidente el Dr. De la Rúa.
o Se inician las mensuras de afectación del “Desvío de Tránsito Pesado” (Camino
de Circunvalación).
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:

15 PTO.MANZANO 1998
11 CRUCE 1998
11 CRUCE 1998
11 ONCE 1998

212
9 L.CORRENTOSO 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
11 PIEDRITAS 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
9 NORTE 1998
11 CRUCE 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
11 ONCE 1998
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 1998
11 ONCE 1998
11 CRUCE 1998
11 PIEDRITAS 1998
9 CRUCE 1998
11 CRUCE 1998

Año 1999
o Es electo intendente el Prof. Roberto Cacault. Años más tarde se construirá el
Gimnasio Adrián Mercado y el Centro Provincial de Enseñanza Media N° 68.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
11 PIEDRITAS 1999
11 CRUCE 1999
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1999
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1999
11 CRUCE 1999
9 NORTE 1999
11 CRUCE 1999

213
12 LAS BALSAS 1999
11 CRUCE 1999
12 Y 13 CUMELEN 1999
11 CRUCE 1999
11 COIHUES 1999
8 ARAUCO 1999
13 LAS BALSAS 1999
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1999
R. Fiscal lote 9 MARGARITAS 1999

214
Año 2000
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 L.CORRENTOSO 2000
11 CRUCE 2000
9 CRUCE 2000
9 L.CORRENTOSO 2000
9 EPULAFQUEN 2000
11 PIEDRITAS 2000
9 L.CORRENTOSO 2000
11 ONCE 2000
11 C.CHICO 2000
12 LAS BALSAS 2000
R. Fiscal lote 9 ANTIL HUE 2000
9 CRUCE 2000
9 PEHUMAYEN 2000
9 PEHUMAYEN 2000
15 PTO.MANZANO 2000
9 EPULAFQUEN 2000
13 F.DEL BAYO 2000
11 CRUCE 2000
12 LAS BALSAS 2000
9 L.CORRENTOSO 2000
11 CRUCE 2000

215
Año 2001
o Convulsión cambiaria en la Argentina, cae la paridad de la moneda nacional
con el dólar, se congelan los depósitos de los ahorristas y se produce un éxodo de
depósitos de cuentas argentinas hacia el extranjero.
o En el mes de diciembre, ante la debacle económica y social renuncia a la
Presidencia de la Nación el Dr. Fernando De la Rúa.
o En Villa La Angostura habitan 7.526 personas (según datos suministrados por
la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia del Neuquén).
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
15 PTO.MANZANO 2001
12 LAS BALSAS 2001
13 F.DEL BAYO 2001
13 F.DEL BAYO 2001
9 EPULAFQUEN 2001
9 EPULAFQUEN 2001
11 CRUCE 2001
9 PEHUMAYEN 2001
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 2001
15 PTO.MANZANO 2001
15 PTO.MANZANO 2001
9 L.CORRENTOSO 2001
9 L.CORRENTOSO 2001
11 PIEDRITAS 2001
9 EPULAFQUEN 2001
R. Fiscal lote 9 CALAFATE 2001
11 PIEDRITAS 2001
11 PIEDRITAS 2001
12 F.DEL BAYO 2001
13 F.DEL BAYO 2001
8 V.CORRENTOSO 2001
9 L.CORRENTOSO 2001
11 C.CHICO 2001
o El día 11 de septiembre, utilizando tres aviones comerciales secuestrados, el
grupo terrorista Al Qaeda destruye las Torres Gemelas en Nueva York y un ala del
Pentágono, en Washington. Es la primera vez que los Estados Unidos son atacados en
territorio propio. En respuesta, Estados Unidos lanza la “Guerra contra el terrorismo”
y atacará Afganistán gobernado por El Talibán, supuesto refugio de Al Qaeda.

216
217
218
Año 2002
o En los dos primeros meses del año se suceden cinco presidentes en la República
Argentina. Finalmente asume la Presidencia de la Nación el Dr. Eduardo Duhalde.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
9 NORTE SUR 2002
9 EPULAFQUEN 2002
MUELLE DE
22 PIEDRA 2002
11 C.CHICO 2002
15 PTO.MANZANO 2002
15 PTO.MANZANO 2002
8 V.CORRENTOSO 2002
13 LAS BALSAS 2002
11 CRUCE 2002
9 EPULAFQUEN 2002
13 VOLCANES 2002
12 VOLCANES 2002
12 LAS BALSAS 2002

219
Año 2003
o Es electo presidente el Dr. Carlos Kirschner, asume el 25 de mayo.
o Es electo Intendente el Dr. Hugo Panessi, asume en el mes de diciembre.
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 2003
R. Fiscal lote 9 ANTIL HUE 2003
12 LAS BALSAS 2003
11 CRUCE 2003
15 PTO.MANZANO 2003
PARQUE
11 INDUSTRIAL 2003
11 CRUCE 2003
9 L.CORRENTOSO 2003
9 L.CORRENTOSO 2003
9 NORTE SUR 2003
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 2003
15 PTO.MANZANO 2003
15 PTO.MANZANO 2003
9 PEHUMAYEN 2003
9 PEHUMAYEN 2003
12 LAS BALSAS 2003
11 ONCE 2003
R. Fiscal lote 9 PUERTOS 2003
16 CHACRAS 2003
12 LAS BALSAS 2003
15 PTO.MANZANO 2003
22 CALFUCO 2003
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 2003

220
o Estados Unidos aliado a Gran Bretaña, bajo el fundamento de que posee armas
de destrucción masiva y es una base de apoyo al terrorismo internacional, en
especial a Al Qaeda, invade Irak.
o Se aprueban las ordenanzas de Planeamiento y Edificación 1414 y 1415 que se
aplicarán a partir del mes de enero de 2004.

221
Año 2004
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
15 PTO.MANZANO 2004
15 PTO.MANZANO 2004
15 PTO.MANZANO 2004
11 C.CHICO 2004
9 NORTE 2004
12 LAS BALSAS 2004
11 ONCE 2004
9 ANTIL HUE 2004
8 BANDURRIAS 2004
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 2004
RINCON DE
R. Fiscal lote 9 LINCH 2004
11 CRUCE 2004
12 LAS BALSAS 2004
9 NORTE 2004
9 NORTE 2004
12 OSA MAYOR 2004
9 L.CORRENTOSO 2004
13 F.DEL BAYO 2004
15 PTO.MANZANO 2004
9 L.CORRENTOSO 2004
9 L.CORRENTOSO 2004
13 F.DEL BAYO 2004

222
12 LAS BALSAS 2004
11 ONCE 2004
9 L.CORRENTOSO 2004
9 NORTE 2004
11 CRUCE 2004
13 F.DEL BAYO 2004
9 L.CORRENTOSO 2004
12 VOLCANES 2004
9 NORTE 2004
13 F.DEL BAYO 2004
9 L.CORRENTOSO 2004
13 F.DEL BAYO 2004
12 LAS BALSAS 2004
9 NORTE 2004

223
224
Año 2005
o Se realiza la última mensura de afectación del “Desvío de Tránsito Pesado”
(Camino de Circunvalación).
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
12 VOLCANES 2005
9 EPULAFQUEN 2005
11 ONCE 2005
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 2005
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 2005
R. Fiscal lote 9 S.TRISTE 2005
9 TRES CERROS 2005
15 PTO.MANZANO 2005
9 PEHUMAYEN 2005
9 PEHUMAYEN 2005

225
9 PEHUMAYEN 2005
9 EPULAFQUEN 2005
12 VOLCANES 2005
12 VOLCANES 2005
12 VOLCANES 2005
9 EPULAFQUEN 2005
9 EPULAFQUEN 2005
9 EPULAFQUEN 2005
9 NORTE 2005
9 TRES CERROS 2005
9 NORTE 2005
9 NORTE 2005
11 ONCE 2005
11 C.CHICO 2005
11 C.CHICO 2005
11 C.CHICO 2005
12 LAS BALSAS 2005
22 CALFUCO 2005
9 EPULAFQUEN 2005
13 F.DEL BAYO 2005
13 F.DEL BAYO 2005
9 NORTE 2005
15 PTO.MANZANO 2005
9 EPULAFQUEN 2005
13 F.DEL BAYO 2005
9 NORTE 2005
9 NORTE SUR 2005
15 PTO.MANZANO 2005
11 CRUCE 2005
12 OSA MAYOR 2005
12 LAS BALSAS 2005
12 LAS BALSAS 2005
12 LAS BALSAS 2005
12 LAS BALSAS 2005
12 LAS BALSAS 2005
R. Fiscal lote 9 PINAR 2005
R. Fiscal lote 9 PINAR 2005
R. Fiscal lote 9 PINAR 2005
9 NORTE 2005
9 L.CORRENTOSO 2005
9 NORTE 2005
9 CRUCE 2005
9 CRUCE 2005
9 CRUCE 2005
9 CRUCE 2005
15 PTO.MANZANO 2005
13 F.DEL BAYO 2005

226
11 PIEDRITAS 2005
9 NORTE 2005
12 VOLCANES 2005
15 PTO.MANZANO 2005
9 EPULAFQUEN 2005
13 LAS BALSAS 2005
o Se construye en forma completa el entubado de la red cloacal de los barrios
Cruce y Once.

227
228
229
Año 2006
o En Villa La Angostura habitan aproximadamente 15.000 personas (según datos
suministrados por la Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia
del Neuquén).
o Se realizan las mensuras de división en los lotes pastoriles y barrios actuales:
R. Fiscal lote 9 PINAR 2006
R. Fiscal lote 9 PINAR 2006
11 CRUCE 2006
9 NORTE 2006
15 PTO.MANZANO 2006
R. Fiscal lote 9 SELVANA 2006
9 NORTE 2006
9 NORTE 2006
9 GRAN CRUCE 2006
11 COIHUES 2006
9 EPULAFQUEN 2006
12 VOLCANES 2006
11 ONCE 2006
8 V. CORENTOSO 2006
15 PTO.MANZANO 2006
9 EPULAFQUEN 2006

230
R. Fiscal lote 9 DEL CIPRES 2006
15 PTO.MANZANO 2006
11 ONCE 2006
15 PTO.MANZANO 2006
8 V.CORRENTOSO 2006
11 ONCE 2006
R. Fiscal lote 9 SELVANA 2006
13 F.DEL BAYO 2006
9 SELVANA 2006
21 Loma GUACHA 2006
9 NORTE 2006
11 CRUCE 2006
11 PIEDRITAS 2006
11 COIHUES 2006
9 L.CORRENTOSO 2006
11 ONCE 2006
11 ONCE 2006
12 Y 13 F.DEL BAYO 2006
13 F.DEL BAYO 2006
13 F.DEL BAYO 2006
12 LAS BALSAS 2006
11 COIHUES 2006
15 PTO.MANZANO 2006
9 NORTE 2006
11 CRUCE 2006
11 CRUCE 2006
12 LAS BALSAS 2006
9 NORTE 2006
15 PTO.MANZANO 2006
9 CRUCE 2006
15 PTO.MANZANO 2006
15 PTO.MANZANO 2006
9 NORTE 2006
9 CRUCE 2006
15 PTO.MANZANO 2006
11 ONCE 2006
9 EPULAFQUEN 2006
11 ONCE 2006

o Se inaugura la Escuela Primaria N° 353.

231
232
Esta cronología nos permite tomar apunten fundamentales para entender el desarrollo
y progresión histórica de la localidad trazando un esquema sociocultural y de uso de la
tierra.
En cuanto a las amenazas, el cuadro permite deducir que las
mismas están, parcialmente, relacionadas con las problemáticas típicas de las
grandes ciudades: temor al delito, a la inseguridad laboral y de ingresos, etc.;
aunque, también expresan el “temor” a que se pierda el elemento distintivo de
la localidad: su imagen de “aldea de montaña”, “pueblo tranquilo” y
“naturaleza exclusiva”. En tal sentido, se expresan discriminatoriamente
temores a la radicación de una mayor cantidad de personas, culpando al
“migrante” por el deterioro del paisaje natural y urbano, sin asumir las propias
responsabilidades y su condición de migrantes, aunque de mayor antigüedad
en la zona. Las objeciones al enfoque tradicional por parte de quienes están a
favor de una estrategia preventiva van en aumento. Pero también es honesto
reconocer, que tales objeciones no se pueden considerar “fáciles” ni

233
“populares”. Estas personas se preguntan cómo se pueden ajustar y rediseñar
ciertos procesos o reducir al mínimo el impacto de las actividades y/o
decisiones. En vez de considerar este proceso como un costo mayor y un
“impedimento para el crecimiento”, consideran mayores las implicaciones de
controlar, administrar y vivir en una región, sociedad y ciudad después de los
hechos.
Por otra parte, es difícilmente imaginable llevar a cabo
exitosamente la administración de un ejido urbano de prácticamente 700
kilómetros cuadrados, con unos 2000 kilómetros de calles, sin adecuar su
presupuesto e ingreso al gasto que ello implica y siendo la herramienta de
administración y manejo una planta de personal municipal cercana a doscientas
personas, entre ellas un área técnica cuyo personal no supera las doce personas.
Claramente, la inversión y el órgano del estado municipal no ha crecido
(evitando analizar su desarrollo) en modo proporcionalmente uniforme a Villa
La Angostura. Conclusión obvia y preliminar.
Sin lugar a dudas, también se hace necesario abordar la tarea
de estudiar y planear sobre ciertos aspectos no contemplados en profundidad
hasta la fecha, igualmente es implícita la necesidad de adecuar y precisar el
marco legal vigente a las nuevas necesidades apreciadas a través de su
aplicación y las omisiones en su contenido. Se hace indispensable un estudio
pormenorizado y minucioso de todo el ejido urbano en todos sus aspectos en
busca de un diagnóstico preciso. A través del mismo iniciar un “plan maestro”
así como un adecuado plan de defensa civil y riesgo ambiental y readecuar el
concepto de las urbanizaciones con fines sociales. De todos modos, tanto los
planes como la legislación, a lo largo de la historia de Villa La Angostura deben
franquear el escollo que significa su forma de ejercicio y aplicación. Así
también, la administración municipal debe enfrentar el desafío de adecuarse al
esfuerzo y pericia requeridos. A continuación detallo algunos ejemplos.

Peligros ambientales naturales

Los peligros ambientales naturales son las condiciones o


procesos del ambiente que dan origen a pérdida de vidas o daños económicos
en poblaciones humanas. Los peligros naturales se distinguen de las
perturbaciones ambientales humanas por el hecho de que deben su origen al
medio natural, no a las acciones humanas. Pero no obstante, más allá de lo que
podemos deducir en forma directa de la anterior definición, la expansión del
hábitat humano sobre un territorio lo lleva a interferir y a exponerse con su
dinámica natural, entonces sí, exponiéndose a los peligros ambientales naturales.
Los peligros naturales más importantes comprenden inundaciones, sequías,
movimientos sísmicos y erupciones volcánicas, desprendimientos de suelo y
aludes, precipitaciones excesivas e incendios no provocados por el hombre. Son
ejemplos de perturbaciones ambientales humanas la contaminación del agua,

234
suelo y aire, la eliminación inadecuada de residuos tóxicos además de residuos
sólidos, líquidos y sanitarios en general, los peligros asociados con la falla de
los componentes manufacturados de nuestro entorno (por ejemplo, el derrumbe
de un edificio o de un puente, o las intoxicaciones u enfermedades derivadas
del uso de ciertos tipos de materiales de construcciones dañinos para la salud) y
la emisión accidental de gases nocivos o vertido de tóxicos por la utilización de
tecnología inadecuada tanto sea por sus componentes como por su grado de
mantenimiento y conservación.
Esta distinción entre perturbaciones de origen natural y
humano es útil porque sugiere hacia dónde se debe dirigir la atención cuando
se intenta atemperar o controlar los peligros. La quebrada y variable topografía
de Villa La Angostura, el hecho de que gran parte del ejido urbano se encuentre
aguas arriba o abajo o ladera arriba o ladera abajo, hace de este un sistema
interconectado directamente entre si repercutiendo en el uno u otro sector las
acciones llevadas adelante en cualquiera sea de sus sectores. De un modo u
otro, la acción aplicada sobre alguno de sus puntos genera distintos grados de
impacto en las restantes. Al examinar los riesgos de inundación, por ejemplo, es
sin duda necesario concentrar la atención en los procesos naturales de
precipitación, drenaje y comportamiento de corrientes y napas para mitigar sus
efectos. Cuando se examinan problemas de contaminación o peligros
tecnológicos, son los procesos industriales y el diseño de los sistemas de
ingeniería los que demandan atención además de los procedimientos naturales
a los que afecta la contaminación. Entender los procesos naturales solo es una
parte necesaria del manejo de los peligros naturales, pero no basta por si mismo
puesto que los peligros naturales no son siempre totalmente “naturales” ni las
perturbaciones ambientales humanas se deben por completo a las actividades
de la gente.
El problema de los peligros ambientales naturales debe su
importancia a dos hechos. Primero, los daños y la pérdida de vidas que sufre la
sociedad son sucesos, inmediata o mediatamente, catastróficos que hacen de los
peligros naturales un problema destacado para las personas expuestas al riesgo
y para sus gobiernos. Segundo, en el campo de control ambiental el historial
más grande se encuentra en los registros de cómo han hecho frente las personas
a los peligros naturales.

Clasificación

Es evidente que los peligros naturales comprenden una


amplia gama de fenómenos diferentes. Estos se pueden clasificar de acuerdo
con el proceso causal principal de cada uno; para el caso de Villa La Angostura,
se nos hace difícil seleccionar y poner en primer término entre los peligros
geofísico y biológico. Los peligros geofísicos se pueden separar en los que

235
tienen relación con procesos atmosféricos (fenómenos climáticos y
meteorológicos) y los que están conectados con los procesos geológicos y
geomorfológicos.

Nieve y hielo Avalanchas Enfermedades fúngicas Enfermedades


bacterianas y virales
Sequías Sismos Infestaciones Infestaciones (termitas,
(freatófitos, por ej.) por ej.)
inundaciones Erosión (incluso erosión Mordeduras y picaduras
de suelos, de litorales y de animales venenosos
playas)
niebla
heladas
Ondas cálidas Desprendimientos de Fiebre del heno Deterioro de las
tierra edificaciones por
infestaciones de insectos

Rayos o incendios Erupciones volcánicas


Lluvias torrenciales Desprendimientos de Plantas venenosas Bacterias propias de los
tierra desechos humanos en
capas superficiales del
suelo
vientos Erosión de suelos, Enfermedades alérgicas
afectación de la Diseminación
vegetación
* Es fundamental, y nótese la ausencia en el presente cuadro, que no se han incorporado los
factores de impactos sociales y económicos, punto a revisar concienzudamente.

La investigación de los peligros naturales se asigna a


diferentes disciplinas científicas. Así, los meteorólogos e hidrometeorólogos
estudian el tiempo, la formación y comportamiento de las tormentas, la
intensidad de la precipitación pluvial y otros factores que dan origen a
inundaciones. Los hidrólogos se ocupan de la magnitud y la frecuencia de las
inundaciones y de su predicción. Los campos de la geología y la geofísica se
subdividen en especializaciones como la sismología, la vulcanología y la
geomorfología. Por lo común, estos especialistas estudian los mecanismos y
procesos físicos básicos y se ocupan menos del control y el manejo de los
peligros relacionados. Esto da origen a ciertas diferencias fundamentales de
enfoque, ejemplificadas por los intentos para crear escalas de medición de los
peligros naturales. Se necesitan diferentes tipos de mediciones para propósitos
distintos, pero, no obstante, lo que es un hecho, es que en Villa La Angostura se
hace fundamental e indispensable este estudio, no sólo dada la magnitud sino
para precisar las escalas futuras y la toma de decisiones como, por ejemplo, el
disponer cuáles son las áreas que son posibles centros de densificación de la
ocupación y la determinación del modo de división de la tierra y la
urbanización de la misma.

236
Se hace indispensable al día de hoy, dar curso al estudio de
las parcelas situadas en las distintas áreas del ejido urbano, a los fines de
analizar su topografía, pendientes y perfiles, aislándolas y dándoles un
tratamiento diferenciado. De este modo realizar las modificaciones necesarias a
los códigos de planeamiento y edificación, estableciendo mediante ecuaciones
precisas las proporciones de FOS y superficie por la cual ha de ser posible su
división a los fines de su mejor conservación y preservación. De igual modo, ha
de darse un tratamiento minucioso a la denominada “banda bosque”,
manteniendo en la mayor medida posible su intangibilidad fundando ello en la
base de la conservación de los valores paisajísticos (hoy recurso fundamental de
Villa La Angostura y la industria turística, uno de los pocos elementos de
diferenciación en el amplio mercado turístico argentino e internacional) y la
ineludible cuestión de que todo se encuentra situado ladera y aguas debajo de
dicha área
La medición de los peligros naturales tiene dos enfoques
principales. El primero se orienta al proceso geofísico y procura medir sus
dimensiones por volumen o energía. El segundo examina los efectos e intenta
medirlos. La diferencia fundamental entre los dos enfoques proviene de los
diferentes objetivos. Por ejemplo, el efecto de una fuerte tormenta de nieve en
una ciudad grande, o como es este caso en particular que se trata de un área
urbanizada muy extendida, medida en profundidad de acumulación de nieve y
en velocidad del viento, tendrá un nivel de efecto diferente de acuerdo con una
serie de factores. Esta variabilidad se aplica a otros peligros naturales. Por
ejemplo, el volumen de descarga de un río puede tener poca o ninguna relación
con la cantidad de daños por inundación; el déficit de humedad medio por el
método de balance de agua o el índice de sequía de Palmer, no miden los daños
reales en la agricultura.

237
FACTORES QUE AFECTAN EL IMPACTO DE
LAS TORMENTAS DE NIEVE EN ÁREAS URBANAS
Cuanto más frecuentes son, más preparada está la ciudad y menor es el efecto por
unidad de nevada.
La municipalidad de Villa La Angostura no cuenta con una infraestructura
Frecuencia de las adecuadamente preparada y proporcionada a las tareas que debe llevar a cabo. La
tormentas de nieve fuertes indumentaria del personal es deficiente al igual que el número de personal
(escaso). Sólo cuenta con tras máquinas moto­niveladoras para tal fin y no hace
adecuado uso de sus recursos al no disponer de otros vehículos con la adaptación
técnica para esos usos y fines.
Las acumulaciones de nieve en calles con pendiente originan trastornos mucho
mayores del tránsito que cantidades similares de nieve en suelos horizontales.
En general, las calles y carreteras de Villa La Angostura poseen pendientes que
van desde la media hasta las muy pronunciadas. De igual modo, las parcelas
ubicadas dentro del ejido urbano poseen fuertes pendientes, mayormente
irregulares. La traza caprichosa del tejido vial urbano se debe a los caprichos y
necesidades de los distintos y sucesivos loteadores, e incluso en algunas áreas se
Pendiente del terreno, en especial encuentran mensuras aprobadas conteniendo no sólo calles inadecuadas para el
calles y carreteras tránsito vehicular sino que muchas de ellas son absolutamente impracticables e
irrealizables. Las dificultades generadas por la precipitación nívea son aún
mayores por las que generan las intensas precipitaciones que se producen a lo
largo del año. La inadecuada traza de calles y la disposición de las parcelas sobre
una topografía tan compleja y la composición del suelo origina un constante mal
estado de las calles, con la aparición de cárcavas y escorrentías, la urbanización
de dichas parcelas origina desplazamientos de suelo más o menos controlados y
acelera el escurrimiento del agua sobre su superficie.
Las tormentas de nieve que se producen durante la noche o a la mitad del día
tienen menos efectos en el tránsito que las que ocurren en horas pico. Las
Momento en que se producen tormentas que se presentan durante el fin de semana afectan menos el tránsito
que las que acaecen entre semana. Pero los efectos sobre la actividad turística son
constantes.
A temperaturas cercanas a la congelación, la aplicación de sal a las carreteras las
despeja rápidamente. A temperaturas más bajas, es necesario palear y quitar
Nivel de temperatura asociado físicamente la nieve. Cuando las temperaturas cercanas al punto de
congelamiento son repetitivas a lo largo de los días, se congela la capa superficial
del suelo tornándose impermeable. Ello deriva en nuevos y diferentes problemas
para el escurrimiento de las aguas superficiales.
Una ciudad con un sistema de tránsito bien desarrollado, incluye medios de
transporte alternativos. De todos modos, una readecuación en Villa La Angostura
Disponibilidad del transporte del transporte público de pasajeros, estableciendo recorridos más precisos y
público ajustando sus frecuencias, así como un control más estrecho de la prestación del
mismo, parece ser una de las tareas más urgentes en este sentido.
* Los niveles de precipitación nívea y la cantidad de precipitación en forma de lluvias tienen un impacto directo sobre
las edificaciones realizadas sin una adecuada dirección técnica y con materiales inapropiados, entiéndase por ello las
ubicadas en su más alto porcentaje en los barrios populares y pertenecientes al grupo social de más bajos recursos. Es
una razón más para realizar el empadronamiento compulsivo de tales edificaciones y regular tanto su construcción
como el modo en que es llevado a cabo.

En términos generales se carece de buenas escalas de


medición para el efecto de los peligros naturales. El mejor criterio disponible es
la pérdida económica, los daños, el costo que su saneo implica a la
administración municipal y el porcentaje de personas que involucra.
La distinción entre peligros y condiciones normales es
importante para entender el manejo de los peligros o la adaptación a los
mismos. Es sólo cuando se producen acontecimientos fuera de lo ordinario que
existe un peligro para una sociedad bien adaptada a su entorno. El estado
general del órgano administrador y prestador de servicios de este municipio
difiere en mucho de ser el óptimo. Pero del mismo modo en que se producen

238
día a día con el crecimiento demográfico y la urbanización constante de su
territorio, también es urgente adaptarse a los estándares de prestación de
servicios deseado en un pretendido “destino de excelencia”.
Tomando en cuenta que los peligros ambientales son
fenómenos interactivos más que acontecimientos independientes, Mitchell (en
EUA) considera que el grado de un peligro es una función de riesgo, la
exposición, la vulnerabilidad y la respuesta.

Peligro = f (riesgo x exposición x vulnerabilidad x respuesta)

Se considera que el riesgo es la frecuencia de los incidentes.


La exposición es la magnitud de la población y las estructuras en riesgo. La
vulnerabilidad se puede medir en términos de preparación, donde un grado
alto de acciones de preparación, en muchos casos con base en experiencias
previas, da por resultado una vulnerabilidad baja. Según los cálculos
realizados, Villa La Angostura es altamente vulnerable a prácticamente todos
los ítems analizados. Como sucede en el caso de los grupos culturales del
Canadá o Marruecos, adaptados los unos a los rigores árticos y los otros a los
calores extremos, las acciones de preparación pueden ser parte de la “vida
diaria” y convertir en normales los acontecimientos que de otro modo serían
peligrosos. Si nos avocamos a la población autóctona de Villa La Angostura, el
acervo de conocimientos en tal sentido transforma en normales muchos de los
acontecimientos. Pero llevando a cabo una visión más profunda de la situación,
la heterogeneidad de su población, las actividades económicas y las
características urbanísticas disímiles, las situaciones y respuestas pueden
ubicarse muy lejos de los parámetros de respuesta, “vida diaria” y
“normalidad”. La respuesta incluye las acciones adoptadas por los directamente
afectados y por las dependencias gubernamentales externas para mitigar las
pérdidas que podría causar el peligro ambiental. Los peligros son fenómenos
reactivos, no absolutos.
El ambiente cambia no sólo a causa de acontecimientos
naturales; los actos humanos dan por resultado un cambio ambiental drástico.
Por consiguiente, una consideración de los peligros naturales implica apreciar
cómo se comparan los cambios en el ambiente causados por acontecimientos
naturales con los cambios que originan los actos humanos. El punto de vista
convencional que asume que los efectos ambientales más grandes provienen de
los peligros naturales ha sido cuestionado en los últimos años. Por otra parte, la
mayor parte de los acontecimientos geofísicos extremos no causan un cambio
permanente en el ambiente, pero de todos modos, el régimen económico y
laboral actual de Villa La Angostura no nos puede permitir “años malos”. A los
acontecimientos geofísicos se los puede considerar como fluctuaciones o
desequilibrios temporales, de los cuales los sistemas ambientales regresan a un
estado “normal”, o de equilibrio. Desde luego, estos cambios ambientales

239
temporales tienen efectos graves en la sociedad. Ellos representan una
desviación respecto a las condiciones normales a las cuales los humanos, sus
bienes y su actividad se hallan adaptados. En cambio, la mayoría de los cambios
debidos a actividades humanas se verifican con lentitud y, por tanto, dan
oportunidad para la adaptación. Es de considerar la idea de que urgentemente
se debe hacer una revisión y reestructuración de las normas y criterios
aplicados a la ocupación y división de la tierra, le densificación urbana y la
política migratoria (el desarrollo de la misma se hace indispensable e inmediato,
a los fines de aliviar la presión y la carga, reconociendo que el crecimiento es
finito visto que la tierra urbanizable y el equilibrio del ambiente no es infinito).
Igualmente regularizar los modos de división del suelo hace más adecuado el
reparto de la carga a lo largo y ancho del territorio urbanizable.
En la actualidad es común hablar de adaptaciones a los
peligros e incluir en el conjunto de ellas todas las acciones que se podrían llevar
a cabo para alcanzar un equilibrio. Son cinco los conjuntos de adaptaciones:
� Compartir o sobrellevar las pérdidas y trastornos, o
aceptación;
� Control de los peligros y riesgos, o control
tecnológico;
� Adaptaciones sociales, o reglamentación;
� Cambios al uso radical y migración, o reubicación; y
� Planeación de emergencias, o medidas de emergencia.
Todas ellas pueden considerarse una secuencia de respuestas
cambiantes y que toman la experiencia de los cada vez más alarmantes peligros.
Si tenemos en cuenta los síntomas y problemas mostrados por los Barrios Las
Margaritas y El Mallín, podemos inferir que la población allí asentada es una
población en riesgo y hace inmediatas las medidas a los fines de su
reordenamiento. Por ejemplo, si tenemos en cuenta que:
� Población: 3500 habitantes (estimado)
� Agua potable utilizada: 1.125.000 litros cada 24 horas
(aprox.)
� Deposiciones humanas: 1.800 kg. Cada 24 horas (aprox.)
� Precipitaciones pluviales anuales: 2500 a 3000 mm.
� FOS total disponible utilizado: 76 % (estimado según
cálculos)
Y si tenemos en cuenta que todo ello está contenido dentro
de una misma cuenca, sobre un terreno mallinoso, situado entre tres claras y
fuertes divisorias de aguas, el nivel promedio de ingreso per cápita, etc. …
Concluimos fácilmente que se trata de una población en riesgo, e incluso a los
fines de la administración gubernamental implica una gran carga y un pasivo
muy fuerte para el estado y los demás contribuyentes. Fácilmente derivamos de
ellos que se hace indispensable en Villa La Angostura el ordenamiento

240
territorial para tales barrios, un ordenamiento exhaustivo y el término de los
modos de establecer soluciones habitacionales.
La aceptación es la respuesta más común a los peligros
naturales, esto es así porque muchos acontecimientos peligrosos son de
importancia más bien menor y es más fácil sobrellevar la pérdida que emplear
el tiempo y los recursos necesarios en una respuesta activa.
El control tecnológico es un segundo conjunto de
adaptaciones que consiste en que las que se encaminan al control de los
acontecimientos naturales mismos.
La reglamentación representa una muy amplia gama de
adaptaciones posibles en la operación de la sociedad humana que pueda ser
capaz de reducir la vulnerabilidad a los peligros. Un enfoque obvio consiste en
mantener a las personas y las propiedades lejos de las áreas peligrosas o
arbitrar los medios necesarios para que no se tornen en tal sentido. Esto se
puede hacer por medio de la planeación y reglamentación del uso del suelo, lo
cual constituye la adaptación más eficaz. Muchas políticas sociales tienen un
efecto indirecto y en muchos casos involuntario en la vulnerabilidad de una
sociedad ante los peligros. Por ejemplo, los programas de renovación urbana o
reurbanización, pueden incrementar o reducir las pérdidas futuras, la política
de transporte logra impedir los trastornos que causan las tormentas y los
códigos de construcción pueden modificar el alcance de los daños al entorno y
los habitantes.
Ha de tenerse en cuenta la reubicación. Una forma extrema
de adaptación social es la modificación del uso del suelo y la migración. De
hecho, no es aconsejable alentar la inmigración y el asentamiento cuando las
tierras disponibles a fines de soportar esa carga impliquen elevar los riesgos
ambientales y los costos para atenderlos adecuadamente.
Muchas dependencias gubernamentales locales en distintos
sitios del mundo han establecido organizaciones específicas y organizaciones de
emergencia con el objetivo de prepararse y atender los daños provocados tanto
por los orígenes humano y natural y dar respuesta ante los mismos. Estas
medidas enfocadas se complementan con material y campañas de
concientización pública que informan al público en general acerca de sus
responsabilidades individuales en el contexto general de la comunidad a la que
pertenecen.
Las grandes “decisiones difíciles” que hubo de enfrentar esta
comunidad, analizadas dentro de su contexto socio­histórico­cultural no han sido tan
complejas, pero las mismas razones que “descomplejizan” tales decisiones hoy son
fundamentos irrevocables para declarar irrepetibles. Cuando Villa La Angostura
enfrentó el emprendimiento de un centro de esquí en plena cuenca alta del Río Bonito
con un desmonte muy importante, la situación de desarrollo y crecimiento locales
parecían impulsarlo, al igual que el potencial crecimiento del mismo ante las
localidades de San Carlos de Bariloche y San Martín de los Andes y un eventual plano

241
de competencia. Así también, la decisión de construir un camino que llevara desde la
Ruta Nacional 231 (en aquel entonces Ruta Complementaria F) hasta el sitio de
localización de las pistas en apariencia resultó en una “pérdida aceptable”. Si bien los
conceptos de “medio ambiente” y “desarrollo sostenido” se encuentran acuñados y en
desarrollo en la humanidad mayormente desde fines de la década de 1960, las obras a
las que me refiero se corresponden a mediados de la década de 1970 en la República
Argentina, Nación en la cual los conceptos de un manejo más eficiente y amigable del
ambiente desembarcaron cerca de una década después. Pero antes de seguir
dispersándonos en este amplio abanico de temas divergentes que convergen en la
relación de Villa La Angostura con su medio ambiente, considero que es fundamental
que antes de ejecutar cual sea de los planes (mucho antes que efectuar las acciones para
concretarlo), se considere cierto número de preguntas. Todo proyectista y planificador
debería ser capaz de generar las respuestas a las siguientes preguntas:
� ¿Que tipo de proyecto se está considerando?;
� ¿Cuáles son las dimensiones físicas del área sujeta a consideración?;
� ¿Cuánto tiempo se necesitará para poner en práctica el proyecto?;
� ¿Se comprometen terrenos en forma irrecuperable?;
� ¿Es el proyecto una fase crítica de un desarrollo mayor?;
� ¿Cuáles son los planes a largo plazo de quien propone?;
� ¿El proyecto aprovecha en forma óptima a los trabajadores locales, los recursos
renovables y otros beneficios?;
� ¿Habrá trastornos ambientales de consideración durante la construcción?;
� ¿Es complejo el terreno y crea dificultades para pronosticar cosas como la calidad
de las aguas subterráneas, las características del suelo y el transporte de la
contaminación?;
� ¿Es probable que el lugar particularmente susceptible a desastres naturales?;
� ¿Obligará el proyecto a mudar personas y alejar o re localizar usos de cierto tiempo
de permanencia?;
� ¿El proyecto interrumpirá la trama vial urbana, declarada esta o no, o impedirá o
dificultará el acceso público a algún sitio de valor de uso público o históricamente
utilizado?;
� ¿Los usos se corresponden a usos y bienes públicos?;
� ¿Cuál es el monto de inversión pública necesario para tal re localización posible?;
� ¿Se pondrán en riesgo sitios de valor histórico, paisajístico o vías públicas y accesos
tradicionales?;
� ¿Interferirá el proyecto con la libre vida de la fauna autóctona?;
� ¿Cuáles son los principales atributos de la flora y fauna existentes?;
� ¿Es inadecuado el ambiente local para que el proyecto alcance un éxito total?;
� ¿Cómo son las reglas y procesos gubernamentales pertinentes?;
� ¿Cuál es, legalmente, la tierra implicada en el proyecto? (mensuras, posesión,
dominio);
� ¿Están claramente identificados los participantes en el proceso del estudio de
impacto ambiental?;
� ¿Qué dificultades para la puesta en práctica cabe esperar durante la construcción y
operación del proyecto?;
� Para esta clase de proyecto, ¿cuáles son los posibles efectos en el ambiente?;
� ¿A quiénes afectará ese impacto?;

242
� ¿Quién gana y quién pierde con este proyecto?;
� ¿Cuántos ganan?;
� ¿Es apreciable la distribución de la inversión y las ganancias entre las diversas
componentes sociales o se concentrará en un punto determinado?;
� ¿Cuáles son las compensaciones?;
� ¿Reducirá el proyecto las desigualdades entre grupos ocupacionales, étnicos, de
género y edad?;
� ¿Cómo afectará a la demanda habitacional?;
� ¿Se combinará el proyecto con (o realzará) los elementos y patrones valiosos de la
cultura local?;
� ¿Cuáles son los estándares, criterios, objetivos y reglamentos del planeamiento
ambiental?;
� ¿Existe información acerca de los efectos de proyectos similares?;
� ¿Cuáles son las fuentes de datos ambientales pertinentes?;
� ¿El nivel de datos se encuentra en la medida de la que se necesita?;
� ¿Las conclusiones (proyecto presentado) concuerdan con el orden de desarrollo y
superposición de los datos obtenidos en los estudios?;
� ¿Cuáles son los puntos de vista del público en general y de los grupos de
especialistas acerca de la propuesta del proyecto?;
� ¿Hay expertos locales efectivamente capaces de proporcionar asesoría respecto a
efectos específicos?;
� ¿Existe la posibilidad de buscar asesoría externa de un especialista (real)?;
� ¿Existen publicaciones que podrían ayudar a identificar los efectos posibles del tipo
de proyecto específico?;
� ¿El organismo administrativo municipal está en condiciones de monitorear tal
proyecto?;
Y la respuesta a estas preguntas debe resultar satisfactoria para la
suma de todas las partes de la sociedad.
El acceso a los recursos naturales y ambientales permite a la
sociedad la satisfacción de un conjunto nada desdeñable de necesidades. Ahora bien,
teniendo en cuenta el carácter no producido de estos recursos originales, su gestión
debe apoyarse en el reconocimiento de un derecho igual al disfrute de sus servicios, y
no es lógica de la apropiación privada. Esta afirmación, que probablemente no
encuentre grandes objeciones en el terreno de los recursos ambientales, parece ser mas
difícil de aceptar en el caso de los recursos naturales (minerales, bosques vírgenes…).
Sin embargo, el principio subyacente en ambos casos es el mismo, y lo cierto es que el
análisis económico convencional ha tendido a tratar la apropiación privada de los
servicios de estos recursos (de las “propiedades indestructibles del suelo”, para utilizar
la terminología acuñada por Ricardo) como difícilmente justificable desde una
perspectiva ética. La popularidad de la que han gozado las distintas variantes del
impuesto único sobre las rentas de la tierra no reposa únicamente en consideraciones de
eficiencia. Retornando a la cuestión de la falta de lógica en la cuestión de la apropiación
privada de los recursos ambientales, está demás poner acento en que éste es
precisamente el reto al que se enfrenta el administrador público o el decisor social:
garantizar el acceso a los servicios ambiéntales y naturales a todo el mundo en
igualdad de condiciones, consiguiendo al mismo tiempo priorizar aquellos usos de la
misma que maximicen el bienestar social que generen un mayor valor social (de este

243
modo, la sociedad se apropiará del ambiente circundante, de los espacios internos del
Ejido y proyectarse de manera diferenciada al Parque Nacional). Por ello se ha
criticado, en algunos círculos más abiertamente que en otros, la composición y valía de
los talleres convocados para la formación del denominado Plan de Desarrollo
Estratégico de Villa La Angostura (recordemos lo que Jean Jacques Rousseau afirmaba
en “El Contrato Social” expresando que “(…) (se considera que) la voluntad general es
siempre recta y tiende a la utilidad publica, pero no que las deliberaciones del pueblo. Se quiere
siempre el bien, pero no siempre se sabe donde esta. Nunca se corrompe el pueblo, pero
frecuentemente se le engaña, y solamente entonces es cuando parece querer lo malo. Hay con
frecuencia bastante diferencia entre la voluntad de todos y la voluntad general; esta no tiene en
cuenta sino el interés común; la otra busca el interés privado y no es sino una suma de
voluntades particulares. Pero quitad de estas mismas voluntades el más y el menos, que se
destruyen mutuamente, y queda como suma de la diferencia la voluntad general. (…) Pero
cuando se desarrollan intrigas y se forman asociaciones parciales a expensas de la asociación
general, la voluntad de cada una de estas asociaciones se convierte en general, con relación a sus
miembros, y en particular, en relación al Estado; se puede decir entonces que ya no hay tantos
votantes como hombres, sino como asociaciones. Las diferencias se reducen y dan un resultado
menos general. Finalmente, cuando una de estas asociaciones es tan grande que prevalece sobre
todas las demás, el resultado no será una suma de pequeñas diferencias, sino una diferencia
única; entonces no hay voluntad general, y la opinión que domina no es sino una opinión
particular. Es importante, pues, para la formulación de la voluntad general que no haya
ninguna sociedad parcial en el Estado”).
Buscando no sólo situarnos en los planos locales, regionales sino
también en los internacionales, situándonos sobre las trazas de los rumbos tomados
por el mercado turístico internacional, volvamos una vez más a cuestiones más
globales. Cuando el nivel de desarrollo económico y social alcanzado es relativamente
bajo, prima la utilización de recursos con una orientación productivista (producción de
bienes genuinos para generar riqueza dentro del esquema de la economía tradicional,
ello excluye servicios o “productos inmobiliarios”); explotando directamente estos
recursos para la satisfacción de necesidades materiales o para, cuando no son
consumido directamente, apoyar sobre ellos la puesta en marcha de una serie de
actividades productivas que generan riqueza y empleo.
Sin embargo, cuando la sociedad (global para acercarnos a los
intereses de desarrollo local) va elevando su nivel de desarrollo y, paralelamente, el
conjunto de necesidades de sus miembros y agentes que podría considerarse
satisfecho, la demanda social por los atributos naturales comienza a cambiar.
Comienza a primarse su conservación o reversión al estado natural, o a un estado más
cercano al origen que proporciones un disfrute más cercano a éste. Esta reversión a un
estado más natural, no intervenido, tanto por el valor que se otorga al disfrute de una
serie de actividades en contacto con el medio natural, cómo el papel que éste recupera
en términos culturales, no sólo locales, históricos e incluso de identidad colectiva (por
ejemplo es innegable la visión de una unicidad patagónica que une ambos lados de la
cordillera desde la Araucania Chilena hasta la última isla del archipiélago fueguino).
Junto a los valores simples de uso del recurso, se comienza a valorar su existencia. Esta
evolución del carácter de la demanda con respecto a los servicios de los recursos
ambientales viene acompañada, al mismo tiempo, de otro cambio no menos
importante: las personas van a dar mayor importancia al disfrute colectivo y

244
compartido de este patrimonio que al consumo individual de sus atributos. La persona,
abandona su papel de consumidor y se conforma en un ciudadano del ambiente que
establece con éste una relación basada en el aprecio. Ello resulta en un nuevo mercado
de consumo al que, dadas las condiciones actuales de desarrollo y crecimiento, Villa la
Angostura aún puede aspirar a formar parte.
La explotación de los recursos naturales y ambientales para la
producción parece tener un valor fácilmente identificable: el valor monetario de los
bienes y servicios obtenidos refleja la disposición a pagar de la sociedad. El hecho de
que el recurso posea altas propiedades en su estado “natural” se traducirá en una
revalorización de las propiedades desde las que se puede acceder a su disfrute y, o, a la
puesta en marcha de estas actividades ligadas al turismo de la naturaleza. Ello se
yergue como elemento de marca y diferenciación de Villa la Angostura.
Si esta valorización resulta tan sencilla, ¿por qué no dejar que sea
un mercado el que asigne el recurso? Cada uno de los usuarios potenciales “pujaría”
por garantizarse su acceso, ofreciendo una cantidad que reflejaría el valor de los
servicios que con el genera. Aún si resultar tan sencillo, el mercado no sería una buena
opción desde el punto de vista operativo por varios motivos de los cuales se destacan
tres principales. El primero, porque quedarían fuera del proceso de decisión una serie
de colectivos afectados por lo que se hace, pero imposibilitados de expresarse (un caso
y ejemplo ha sido la población ubicada históricamente en la zona que el Ejido de Villa
La Angostura y alrededores ante los distintos cambios de usos de la tierra y
fraccionamientos, usos y posesión de ella). Por un lado, obviamente, las generaciones
futuras; por otro, todos aquellos que dentro de la generación presente utilizan los
recursos de forma no organizada o simplemente no lo utilizan directamente valorando
sólo su mera existencia. Esta ausencia de organización dificulta a estos grupos hacer
explícita su disposición a pagar por el recurso, por lo que la demanda no quedaría
reflejada en este caso (hipotético).
La segunda, porque la rentabilidad del acceso a un determinado
recurso natural y/o ambiental, para el agente que ha de competir en un mercado y que
refleja lo que estaría dispuesto a pagar por él, viene determinada por el papel de los
servicios de este recurso en la producción de bienes o servicios, o en la función de
producción de utilidad de las economía domésticas.
El tercero, porque el agente individual que proyecta en su
disposición a pagar por el recurso el valor del bienestar social que su uso depara, no
tiene en cuenta las externalidades que la utilización concreta del recurso representa
para la sociedad. Por ejemplo, ligado a lo anterior, el mantenimiento de una
determinada forma de vida y del acervo cultural ligado a ella. Como es obvio, junto a
las externalidades positivas, también harán su correspondiente aparición un conjunto
de externalidades negativas. Lo fundamental es que, en definitiva, la sociedad no
debería dejar que el mercado fuera el que decida a favor de quién se conserva el uso de
un determinado recurso ambiental y/o natural. El mercado refleja la rentabilidad
privada (financiera) del acceso a sus servicios, que no tiene por qué coincidir con su
rentabilidad social y económica.
Desde la perspectiva de las responsabilidades del Estado, es
analizar hasta qué punto el decisor social, aún cuando no se apoye en la mecánica de
un mercado, podría incorporar la lógica de asignación del mismo, su lógica de
valoración, para distribuir el derecho al disfrute de los servicios ambientales y

245
naturales. El administrador público, podría dilucidar el problema de elegir entre los
distintos usos de los recursos y el territorio. La búsqueda de la eficiencia, en el sentido
más extenso y completo del término, debería priorizar el acceso al uso y disfrute de
los recursos naturales y ambientales de acuerdo al valor que se les otorga. En este
contexto, el peligro de acudir al mercado en busca de ayuda, sea como mecanismo de
priorización de usos, sea como proveedor de una lógica aplicable a la resolución social
del problema es muy alto ya que va a incentivar la explotación de los recursos
ocasionando degradación de los mismos o la privatización de ellos irreversiblemente.
En Villa La Angostura se ha aplicado durante varios años la teoría
política y económica del derrame. Ella se basaba en la idea de que los megaproyectos y
grandes inversiones iban a causar el suficiente aumento en el nivel de ingresos
individual de sus actores importantes que iba a poner en circulación un gran número
de capital; de todos modos, está a las claras que tal teoría no solo falló sino que se
sostiene desde preceptos falsos. No sólo, en muchos casos, la inversión y proyecto
realizados han generado poca “riqueza” en pocos habitantes sino que produce un
drenaje de capitales locales hacia el exterior, no retornando y recirculando dentro de la
localidad (un ejemplo claro son la mayoría de los hoteles y hosterías, otro son los
clubes de campo como Muelle de Piedra, y otro los supermercados “Todo” y “La
Anónima”). En muchos casos estos emprendimientos hacen uso escaso de la mano de
obra local e “importan” mano de obra de otros sitios, complejizando aún más la
necesidad de vivienda, por ejemplo (otro claro ejemplo y principal argumento para
rebatir tal teoría es el que a pesar de haberse realizado grandes inversiones privadas,
proyectos y haberse construido un promedio de más de sesenta mil metros cuadrados
por año en el último quinquenio, no se ha erradicado la pobreza ni solucionado el
problema al “viejo poblador”, al contrario, las carencias y las diferencias sociales son
aún mayores al igual que el impacto ambiental). El estado municipal y el contribuyente
en general debe soportar una gran carga para manejar las condiciones dadas en el
sistema (ambiente de Villa La Angostura), y aún más cargar con las consecuencias de
una inversión o megaproyecto, se deben sacrificar valiosas tierras fiscales para
satisfacer la demanda de vivienda, brindar servicios a cambio de una escasa
recaudación y el ambiente es puesto a prueba con tantas tensiones generadas.
Aplicando una concepción filosófica, una teoría económica y política como la antes
mencionada, la del “derrame”, los efectos acumulativos son muy importantes y, en
ciertos casos, los efectos pequeños dan lugar a una crisis (quizá como la de nuestros
días, con sus primeras manifestaciones) de gran magnitud muchos años después. Éste
ha sido discurso de los pequeños grupos de presión que el Estado hizo propio. Aunque
una planeación exhaustiva y una legislación integral son ingredientes indispensables
para el desarrollo ordenado de los recursos, otras influencias suelen ser más
importantes para determinar qué es lo que se “construye” a final de cuentas. De igual
importancia en el proceso de toma de decisiones son los grupos con intereses
especiales, como los ambientalistas, de contribuyentes en general, las organizaciones
empresariales y los grupos de acción pública. Éstos, organizados para atraer la
atención hacia sus inquietudes particulares, solicitan y a veces captan apoyo político
para oponerse (o promover) proyectos de desarrollo y uso de recursos. Pocos proyectos
de recursos se llevan adelante, en la actualidad, sin un debate animado entre cuyos
intereses, muchas veces en conflicto, están involucrados en él. Este tipo de

246
intercambios ayudan a aclarar los problemas, aunque no necesariamente para la
satisfacción de todos.
El proceso político tiene como base algo más que el debate público
y la enumeración de las preferencias. Los grandes intereses “empresariales” están muy
conscientes de las mayores posibilidades de desarrollo. Sus puntos de vista,
respaldados por un intenso cabildeo político y contribuciones a quienes los apoyan, se
presenta siempre de “modo convincente”. También el público puede ejercer una
presión considerable, y por lo general se considera que estos conflictos se producen
entre el público y el gobierno. Esta idea se fomenta en virtud de simplificar en demasía
las cuestiones complejas.
Analizando la historia local podremos observar momentos
determinantes, tales como los sucesos políticos y económicos nacionales. Asimismo
podremos advertir avances en la infraestructura de la zona que han marcado claros
hitos; ejemplo de ello es la finalización de la obra de asfalto sobre la Ruta Nacional 231
o la integración de Villa La Angostura al sistema de red de gas natural. Pero así y todo,
podremos darnos cuenta de la gran diferencia en aumento progresivo entre, por
ejemplo, la generación de nuevas parcelas a ocupar y la cantidad de hospitales, o el
número de lotes generados en contraste con el número de usinas generadoras de
electricidad, o igual diferencia entre nuevas parcelas o unidades funcionales y cisternas
de almacenamiento de agua construidas (que a excepción de la reciente ampliación de
la cisterna existente en barrio Lomas de Correntoso sobre la calle Coihues, todas ellas
fueron realizadas en las décadas de 1970 y 1980). Igualmente podremos realizar tal
contraste con el número de escuelas. La precarización de la infraestructura y las
acciones realizadas por las distintas gestiones políticas en la Administración Municipal
es notoria y notable. Las tomas de agua construidas sobre el Río Las Piedritas y el A° El
Colorado datan de la década del ’70. Los acueductos que conducen las aguas allí
captadas proceden mayormente de las décadas del ’70 y ’80. De allí que tenemos
alrededor de 14 kilómetros de acueductos realizados con caños de asbesto­cemento;
está demás decir sobre la precariedad de dichos caños, el estado de los mismos y los
potenciales riesgos que representan para la salud pública. Por otra parte, otra forma de
inacción municipal se manifiesta en el hecho de que al realizarse el fraccionamiento
que da origen al denominado “loteo Maikana”, no se interpuso solicitud ni demanda
por parte del Estado y ahora la cisterna de “Selvana”, que abastece de agua a ese
mismo sector y la zona de los puertos, se puede ampliar únicamente en sentido
vertical, es decir, no se dispuso superficie circundante para atender las necesidades
futuras. Otro ejemplo claro es que, las tomas de agua mencionadas más arriba, se
encuentran dentro del Remanente del Lote Pastoril 11 que es de dominio privado (del
mismo modo en que la toma ubicada dentro del cauce del Río Bonito se ubica, junto a
buena parte del acueducto, dentro del Remanente del Lote Pastoril 15 de propiedad
privada). Si revisamos la situación de las tomas de agua y los acueductos respectivos
notaremos que a pesar de transcurrir más de treinta años de su existencia, y de haber
mediado oportunamente un convenio con el propietario posterior a la Sra. Di Sangro
(quien adquiriera la parcela con una “servidumbre de paso a perpetuidad”, es decir,
con la obligatoriedad de ceder paso a quien deba atravesar dicha tierra en un sentido
transversal o longitudinal, digamos desde el lago hasta el “Cajón Negro”; para el caso
de esa compra era desde los fraccionamientos ya realizados, actuales B° El Cruce y
primer sector del B° Las Piedritas al norte de la Ruta Nac. 231, Avda. Arrayanes, hasta

247
el “Cajón Negro” entre las estribaciones del C° Belvedere e Inacayal). Dicho convenio,
el primero o uno de los primeros, comprometía al titular dominial a ceder la superficie
del terreno ocupado por las tomas de agua y los acueductos, en el momento de generar
alguna nueva división, total o parcial. Se produjo un canje de tierras para generar el
“Parque Industrial” allí pero no se generó la cesión de superficie respectiva a los
servicios de agua potable. Luego se generaron sucesivos fraccionamientos e incluso
una mensura del Remanente y el Estado poco hizo por “ordenar” la situación (en la
mensura antes mencionada ni siquiera se relevaban los enclaves de servicios citados.
Recién en diciembre de 2009, dentro de un proyecto de mejoramiento de la toma y
acueducto sobre el Río Las Piedritas, se dispuso una ordenanza que formaba parte del
mismo proyecto que el Remanente del Lote Pastoril 11 quedaba sujeto a servidumbre
de acueducto y expropiación del sector ocupado por las obras de captación de agua.
Claro está, no sin un arduo trabajo. En ambos extremos del Ejido, no se dispone de una
adecuada provisión de agua potable, pero a pesar de ello, el Estado no sólo hizo
recepción de los fraccionamientos sino que además se “hizo cargo”, sin estar a la altura
del compromiso acordado, de asegurar el abasto de agua potable.
No se puede abstraer a Villa La Angostura de la realidad histórica y social
latinoamericana, es absurdo; por ello tampoco la podemos abstraer de la violencia
histórica argentina y latinoamericana. No obstante, reconocer males prenatales ayuda a
vivir los días, a rectificar los errores, al menos, para no repetirlos ni continuarlos en
una perpetua reiteración sin un eterno retorno. En cuanto a algunas cosas, no hay
vuelta atrás, y es posible que de algunas decisiones no sólo las sociedades sino los
ambientes no puedan retornar.
Por otro lado, podemos admitir que dos o más versiones incompatibles
entre sí de la historia deben convivir dentro de una sociedad. Experimentamos una vez
más el eterno retorno a la naturaleza latinoamericana. Al recopilar historias y
testimonios orales entre los viejos pobladores se percibe una notable diferencia con la
historia oficial de la localidad. En ella nada se dice de tomar manejos de ganados y
corrales ajenos, no se hace mención de arreos de contrabando que duraban entre
quince días y un mes para alcanzar territorio chileno atravesando este paso
cordillerano. Tampoco se habla de desplazados, desalojos, estafas particulares y
efectuadas desde organismos del Estado. Pero si nos hablan de estas historias los
relatos orales, nos hablan de muerte, de precariedad, de excesos, de sacrificios, de
pérdida, erupciones volcánicas. Nos hablan de cuestiones notables. También nos
hablan de asuntos notables, destacables y buenos. Cuando el investigador comienza a
recolectar documentos, sin teorías de por medio, da estructura a la pesquisa sin otro
camino que el de conectar un documento con otro, cotejarlo con testimonios, examina
libretas de campo y recorre los sitios referidos y se crea una fuerte impresión (a pesar
de ser puestos los hechos dentro de su justo contexto). Dicha impresión se basa en que
primeramente se concluye en que la “historia oficial” no respeta los hechos, tampoco
los personajes y origina una dramática pérdida de información vital para el presente
mapeo de riesgo
Siendo conscientes de que este no es el fin del presente estudio, y
probablemente no concluya, abriendo las puertas al estudio y la evolución de las ideas
que aplicamos hasta ahora en nuevas ciencias aplicadas, y antes de cerrar el presente
escrito es nuestro deseo expresar una profunda admiración por los hombres sensatos

248
que llenos de ambición apuestan por el futuro estudiando en profundidad, con
dedicación, ética y entrega del cómo administrar y planificar, y todos aquellos que se
han sentido desplazados y bien pueden poner manos a la gran obra del presente y el
futuro común. Sin embargo, la planificación erige responsabilidades perpetuas, por eso
no olvidemos lo que alguien anduvo diciendo por ahí, eso de que con buenas
intenciones está empedrado el camino al infierno.­­

ALGUNOS PUNTOS SOBRE LA VULNERABILIDAD DE VILLA LA ANGOSTURA EN LA


ACTUALIDAD ANTE EVENTOS SISMICOS DE LA ENVERGADURA COMO LOS REGISTRADOS EN
MAYO DE 1960

La clave para realizar una pre evaluación de las condiciones de vulnerabilidad de Villa La
Angostura ante este tipo de sismos extremos es revisar la situación de Villa La Angostura en el
año 1960 y contrastarlo con la actualidad. Posteriormente se debe revisar la situación de la
localidad ante la reciente experiencia de la erupción del CVPCC y las condiciones actuales.
Según los relatos de viejos pobladores, el sismo de 1960 en la localidad registró algunos puntos
relevantes:
� Desprendimiento y remoción en masa de sectores de costa, en especial el sector en el
cual se implantaba el muelle de San Carlos de Bariloche.­

� Desprendimientos, remoción en masa y hundimiento de sectores de costa de los lagos


Correntoso y Espejo Grande.­

� Hundimiento y grietas en diversos sectores (según algunos viejos pobladores


generando pérdida de animales).­

� Desplazamiento de masa/s de agua del lago sobre porciones de la costa, en particular


puntos con baja diferencia de nivel (se ha realizado un trabajo intenso desde
INIBIOMA por parte del Dr. Villarosa, Dra. Outes y otros).­

� Deslizamientos en laderas y caída de árboles.­

Dadas estas referencias, más allá de lo dificultoso que resulta validar con elementos científicos
los relatos orales (subjetividad humana) y encontrar registro natural de los eventos en un
medio ambiente altamente antropizado desde aquellos años, y analizando las condiciones de
ocupación y uso del suelo en el Ejido en el año 1960 podemos detectar a prima fascie zonas
habitadas de gran vulnerabiidad en la actualidad.
Trabajando sobre el material fotográfico satelital y aéreo disponible en la actualidad
(relevamiento fotográfico realizado en abril de 2008) podemos delimitar sectores de particular
interés a los cuales denominaremos zonas de interés en este trabajo preliminar.
Por último realizaremos dos listados preliminares de factores que hacen vulnerables a las
zonas urbanizadas por una parte, y otro indicando las posibles consecuencias sobre la
infraestructura.

249
Ejido de Villa La
Angostura
En rojo de resaltan las zonas de
interés

Relevamiento de parcelas edificadas 2008, en rojo aparecen los lotes con edificaciones
construidas sin aprobación municipal. Alrededor del 60 % de las mismas fue construida sin

250
ninguna supervisión técnica ni cálculo estructural (altamente vulnerables ante fenómenos
sísmicos).­

Los datos arrojados por el relevamiento de edificaciones realizado por la Oficina de


Inspecciones de Obras Particulares en el año 2008, arroja datos más que sugerentes sobre las
condiciones edilicias de Villa La Angostura y sugiere puntos sumamente relevantes a la hora de
comenzar a evaluar la vulnerabilidad de la localidad y sus pobladores ante un evento sísmico
de gran intensidad. Más allá de las cuestiones burocráticas manifestadas por tan alta tasa de
irregularidad, arrojó que un 27% de los lotes del Ejido están edificados de los cuales un 70%
poseía edificaciones de algún tipo que no habían cumplido con las tramitaciones municipales

251
reglamentarias. De este último 70%, alrededor de un 60% del mismo poseía edificaciones que
no sólo no habían recibido aprobación ni registro municipal, sino que habían sido edificadas sin
seguir las normas urbanísticas ni constructivas habiendo sido ejecutadas sin supervisión
técnica ni cálculo de estructuras. A ello se han agregado una gran cantidad de edificaciones
que si bien contaban con los trámites pertinentes y dirección técnica, por una u otra razón, no
respetaron los diseños aprobados alterando estructuras y fundaciones. Ya que la obra
ejecutada prácticamente resulta en cosa juzgada, gran parte de las mismas han sido
documentadas por el municipio sin contar (trámites de medición de relevamiento de hechos
existentes) con un responsable técnico de las mismas. Si bien la última afirmación es más bien
de orden legal, hace a una situación compleja y de elevado riesgo.

Las áreas más delicadas debido a la alta densidad de edificaciones sin supervisión técnica ni
cálculo estructural son dado su elevado porcentaje las ocupadas por los barrios Las Piedritas,
Peumayén, Margaritas y Mallín, estos tres últimos con el agregado de ser susceptibles de
riesgos de fenómenos de licuefacción (que deben ser estudiados detenidamente por una
comisión científico­técnica) que puedan generar hundimientos y colapsos de las edificaciones.
Mismo riesgo debe ser estudiado y evaluado en los sectores de barrios Tres Cerros, Once, Las
Balsas y punto noreste de Barrio Norte.

252
Manzana P, B° Las Margaritas. (Página anterior, barrios Peumayén, Margaritas y Mallín de
derecha a izquierda. Debajo detalle del B° Mallín)

Arriba, B° Las Piedritas. Abajo, B° El Once

Por el tipo de intervenciones constructivas, en particular voladuras practicadas sobre la roca


de la Península de Puerto Manzano, debe ser estudiado y analizado dicho sector ya que, vistos
los estudios científicos realizados en el sector de Bariloche, se estipula que una práctica similar
en esa zona habría favorecido el desprendimiento de la gran porción de roca y suelo en la que

253
se encontraba el muelle de esa ciudad (hoy dicha porción de costa y el muelle en estado
íntegro reposan sobre el fondo lacustre a 65 metros de profundidad).

Arriba, sector interior (este) de Península de Puerto Manzano.­


Abajo, edificación de Puerto Nahuel. En próxima página sector Hostería El Faro.­

254
Arriba, sector Paihuén (escaso desnivel sobre lago). Abajo, sector Marinas de Alto Manzano,
deforestación intensa.­

Estos fueron algunos casos ejemplo.

255
Vistas las zonas de interés, es esperable que en caso de acontecer un fenómeno de alta
intensidad como el ocurrido en 1960, podría esperarse una tasa de muertes y heridos que
fluctuaría entre varios cientos a miles, con muy grandes daños de valor económico rondando la
cifras en varios millones de pesos.

A continuación abordaremos la cuestión de los posibles daños a la infraestructura a través de


un listado preliminar:

� Por caídas de árboles y cableado eléctrico aéreo colapsaría el sistema de distribución


de energía eléctrica.­

� Por caídas de árboles y cableado telefónico colapsaría la red de telefonía fija.­

� Por posible pérdida o caída de antenas situadas en la cumbre de Cerro Bayo colapsaría
el sistema de telefonía celular.­

� Por posible colapso de uno o más puentes sobre traza de Ruta Nac. 231 o razones
similares podría resultar dañado el gasoducto dejando por al menos de 48 a 72 hs. a la
localidad sin gas natural.­

� Por posible colapso de puentes, alcantarillas u otras razones corte de la fibra óptica.­

� Por posibles deslizamientos de laderas que pudieran interrumpir la traza de la Ruta


Nac. 231 tanto en sentido sudeste como noroeste la localidad quedaría incomunicada
por vía terrestre.­

� Interrumpidas vías de evacuación terrestres.­

� Interrumpidas vías de abastecimiento terrestre.­

� Por posibles deslizamientos de laderas en sector ubicado entre Río Ruca Malén y
Paraje Quintupuray quedaría interrumpido el tránsito terrestre por Ruta Nac. 234
hacia San Martin de los Andes y Villa Traful.­

� Existe la posibilidad de que por desprendimientos de laterales de cauces y cabeceras


colapsen alguno de los dos o ambos puentes incomunicando por vía terrestre o
particionando el Ejido en tres secciones transversales.­

� Los principales acueductos de las tomas de agua ubicadas sobre los cauces de los
arroyos El Colorado y Las Piedritas, construidos de conductos de asbesto cemento,
sufrirían muy probablemente daños quedando inutilizados durante cierto tiempo.­

� Por posibles colapsos o remociones de los veriles podrían verse dañados los sistemas
de bombeo de Bandurrias, Quetrihue y Bahía Mansa, así como los bombeos privados.­

� En caso de registrarse incendios en una etapa inmediatamente posterior no se contaría


con un volumen de agua suficiente para abordarlos, contando siempre con el caso de
que los equipamientos de cuarteles de bomberos se encuentren intactos en la fase
posterior al evento.­

256
� En caso de iniciarse procesos eruptivos inmediatamente posteriores a un gran sismo,
tal como fue el caso de mayo de 1960, y teniendo en cuenta la experiencia reciente y
el estado de la infraestructura actual, no se alcanzaría a restablecer los servicios
básicos durante al menos una o varias semanas.­

� Colapsaría gran número de edificaciones sin estructuras antisísmicas


convenientemente construidas en las zonas de interés sugeridas.­

� Colapsarían edificaciones construidas sobre sectores de costa o podrían sufrir


inundaciones o impactos de agua.­

� En caso de ocurrencia durante la temporada turística los visitantes se encontrarían aún


en más alta vulnerabilidad que los habitantes permanentes debiendo generar
procedimientos de emergencias para mitigar tal situación.­

� En períodos con volúmenes de agua disponible en las altas cuencas de los arroyos Las
Piedritas, El Colorado, Florencia Norte y Sur, zanjón de La Ponderosa, zanjón de
Maderera Misiones y Río Bonito podrían producirse desprendimientos masivos
provocando flujos de lodo.­

Para la lectura del mapeo preliminar generado en junio de 2011

Definiciones para el diagnóstico

Las siguientes definiciones fueron extraídas del texto “Guía para la realización del diagnóstico”
elaborada por el Sr Emilio Germán Arias de la Dirección Provincial de Defensa Civil de la
Provincia del Neuquén.

• Amenaza (peligro potencial) Factor externo


Definida como toda aquella probabilidad de ocurrencia de un fenómeno de origen
natural o antrópico (o la combinación de ambos), que puedan manifestarse en un lugar
especifico con una intensidad o duración determinada.
• Riesgo (peligro claro y presente sobre personas o bienes)
Expresado como la probabilidad de que en función de una amenaza, se produzcan
daños humanos o materiales en un lugar dado y durante un tiempo determinado.

• Vulnerabilidad (condiciones a ser afectadas de la comunidad)


Es la susceptibilidad de una comunidad al impacto de amenazas, condicionada por
factores o procesos que la aumentan o disminuyen.

Descripción de los criterios utilizados para la delimitación de las zonas demarcadas.

La metodología aplicada se corresponde a la superposición y cruzamiento de datos y las capas


generadas cada una a partir de:

� tipología de dato;
� tipología de fuente;
� georeferenciación de imágenes satelitales y relevamiento fotográfico aéreo disponible
en las oficinas municipales;

257
� demarcación de cauces activos e inactivos;
� localización de espejos y cuerpos de agua persistentes, antiguos, deprimidos o
desaparecidos en su superficie por medio de acciones humanas;
� diferenciación en la tipología de cobertura vegetal;
� obras públicas y particulares generadas;
� apropiación de cuencas y costas;
� usos presentes e históricos de la tierra;
� experiencias históricas;
� interpretación de la planialtimetría disponible;
� anexado de plano catastral del Ejido;
� estudios públicos y privados existentes;
� calles y caminos existentes;
� demarcación de cabeceras de cuencas;
� delimitación por zonas según datos de precipitaciones (lluvia y nieve);
� demarcación de máximas precipitaciones según historial y comportamiento de los
diversos sectores del Ejido durante la experiencia;
� cálculos de aproximación de los aportes líquidos y sólidos al suelo generados a partir
de la presencia humana;
� expresión cartográfica de la información recopilada;
� mapeo de infraestructura urbana y vías de circulación;
� relevamiento de la red eléctrica;
� características geomorfológicas detectadas y comportamiento de los suelos a partir de
experiencias derivadas de la extracción de la cobertura forestal;
� tipificación de niveles socioeconómicos presentes en los distintos barrios;
� capacidad de respuesta técnica; y
� monitoreo de cuencas principales bajo los presentes efectos de las precipitaciones
producto de la erupción volcánica y precipitaciones pluviales.­

Producto del desarrollo descrito se delinean grandes grupos representados:

o Suelos vulnerables:
Faldas medias y superiores de los C° Bayo, Inacayal y Belvedere, cauces de ríos y arroyos
activos e inactivos, y sectores de costa, con características geomorfológicas determinadas,
niveles antrópicos que vulneran la estabilidad natural de sus suelos y comprobada incidencia
de las precipitaciones regulares. A ellas se suman las zonas caracterizadas por mayor
acumulación de precipitación nívea.
o Zonas inundables:
Aquellas que por su localización particular, antecedentes físicos, características de sus suelos,
niveles, recurrencia, modificación de cuencas y cauces naturales por la mano del hombre,
modificación por urbanizaciones de su capacidad de carga y conducción /escurrimiento de
aguas, que puedan ser vulneradas por puntos de encuentro de grandes cauces de amplia
cuenca o desbordes generados a causa de obstrucciones/aludes generadas en los mismos (A°
Piedritas, Colorado­Florencia y Del Muerto) dentro de un esquema de medias y máximas,
teniendo en cuenta del estado de las cuencas altas en la situación actual.

o Taponamientos recurrentes:
Todos aquellos puntos de acumulación de material forestal o producto de desprendimientos,
arrastre y/o erosión de recurrencia, que puedan derivar en el cambio de dichos causes o ser
mecanismos disparadores de grandes aluviones, teniendo en cuenta del estado de las cuencas
altas en la situación actual.
o Zonas de riesgo:

258
Aquellas determinadas por la superposición e interacción de las áreas abarcadas dentro de las
variables antes descritas.
o Zona vulnerable:
Aquellas en las que se ha detectado sumatoria de factores de emergencia (caso Barrios Mallín
y Margaritas en los cuales debido a la situación sanitaria precedente y densidad poblacional se
sumaría al estado actual producto de la caída de arenas y cenizas volcánicas una emergencia
sanitarias con riesgo de pandemias), características de las construcciones existentes, densidad
poblacional, características de las calles y vías de evacuación, características de la
infraestructura urbana, caracterización socioeconómica y capacidad de respuesta inmediata de
la población ante los factores amenazantes.
o Destacable:
De la demarcación de la áreas o zonas antes descritas es de resaltar de suma vulnerabilidad la
localización de la hoy única planta generadora de energía eléctrica perteneciente al EPEN. La
misma se encuentra ubicada dentro de un área inundable con gran proximidad a los cauces de
los Arroyos Piedritas y Colorado­Florencia y confluencia de los mismos con el consecuente
riesgo de ser afectado por posibles crecidas extraordinarias, lahares o aludes. El gasoducto de
alimentación de los motores generadores se encuentra ubicado a no más de ochenta
centímetros sobre el lecho del A° Colorado­Florencia, uno de los cauces de mayor peligrosidad
demostrada.­

Infraestructura, comercial turístico, rural y demás usos

259
Mapa de riesgo (preliminar)

Mapa de riesgo (preliminar, junio de 2011)

260
La amplia experiencia práctica en el resto del mundo ha demostrado que los Sistemas
de Información Geográfica (SIC) son herramientas considerablemente provechosas y
técnicamente eficientes para realizar estudios territoriales. Ello se debe a las ventajas
operacionales que los SIG poseen y que se relacionan con la integración de la
información de carácter espacial en una base de datos digital (Brignardello, L. y A.
Gutiérrez, 1996). En efecto, cuando los gestores de las políticas y programas sociales,
económicos y ambientales, se han percatado de los valiosos efectos que posee la
dimensión espacial de las variables que conforman un sistema dado al momento de
analizar, evaluar y tomar decisiones, han depositado en estas herramientas
computacionales la tarea de perfeccionar tanto las metodologías de análisis como los
resultados alcanzados. Aunque en este caso la incorporación de estas herramientas
computacionales en las instituciones de administración y gestión pública, de
consultaría profesional y de investigación, ha sido rápida, los resultados obtenidos aún
no han sido rentables ni eficaces en su totalidad por más que su proceso implique una
tendencia positiva. Persiste, sin embargo, la convicción de que los SIG son la mejor
solución técnica al momento de efectuar proyectos y estudios en el ámbito territorial.
Al respecto, uno de los estudios integrados corresponde al de la reordenación del
territorio, el cual pretende orientar el uso adecuado del espacio, compatibilizando la
intensidad de su ocupación, con la fragilidad (sensu latu) del entorno geográfico
definiendo así su capacidad de acogida. En este contexto, la identificación, zonificación
y evaluación de los riesgos naturales son objetivos fundamentales para la ordenación
territorial. Pese a que los llamados "desastres naturales" son eventos frecuentes en
nuestra localidad, no son muchos los estudios tendientes a la detección, predicción y
evaluación de estos hechos. Menos aún son los trabajos de investigación apoyados por
SIG en esta materia, siendo aportes importantes los de SEGEMAR, ONU, Villarosa­
Córdoba y Outes, todos ellos recientes y aún en proceso. Se puede agregar, además,
que muy recientemente se ha incorporado el sistema natural en la planificación del
territorio y que en el tema de los riesgos naturales su inclusión es aún deficiente
(máxime si se examinan los laxos estudios ambientales realizados hasta la fecha más
orientado a justificar un cierto tipo de intervención de tipo fraccionamiento y/o
construcción). Al finalizar el Decenio Internacional para la Reducción de los Desastres
Naturales, la toma de conciencia de este grave problema ha sido eficaz al momento de
establecer acuerdos bilaterales y cooperación multilateral y de implementar otras
medidas complementarias (ONU, 1995; Ayala­Carcedo; J. F., 1993), pero se está lejos de
establecer una estrategia concreta y de disponer de un plan de acción preciso para
mitigar los efectos de los fenómenos peligrosos. A pesar de la incorporación de los SIG
en los niveles gubernamentales tecnócratas y de investigación, los escasos resultados
obtenidos mediante su aplicación en materia de riesgos naturales, aún no han sido
capaces de persuadir a los gestores políticos de la necesidad de realizar estudios
territoriales de evaluación y zonificación de riesgos naturales como instrumentos
indicativos válidos, concluyentes y normativos del uso del suelo.
Si bien es cierto que el sistema natural es dinámico, esta es una característica del paisaje
geográfico no siempre considerada por los planificadores del territorio. Villa La
Angostura, por su posición geográfica (a unos 150 de la zona de subducción de placas
tectónicas y 30 de la Falla Liquiñe Ofqui) y por las características del medio natural
definidas por su extensión latitudinal en sentido noroeste­sudeste y montañoso relieve,
tiene un Ejido constantemente afectado por fenómenos naturales extremos, tanto en

261
intensidad como en magnitud que inciden en forma directa y con alta magnitud. Estos
procesos acontecen por un aporte energético excepcional e inusitado al sistema natural,
o bien, por la liberación de energía potencial almacenada en algún componente del
conjunto sistémico, superando los umbrales usuales en que tales procesos ocurren en el
ciclo dinámico natural. Cuando estos eventos naturales inusuales generan daños en los
elementos culturales del paisaje, se producen catástrofes que, por su impacto
económico, social y humano, son difíciles de reparar. Una de las formas de reducir
estos desastres naturales es determinar el grado de probabilidad de ocurrencia de estos
fenómenos naturales en áreas antropizadas.
Teniendo en cuenta su profuso empleo actual, que se produce en variados contextos,
prevención de desastres, epidemiología y seguridad ciudadana, entre otros, resulta necesario
examinar críticamente sus alcances como herramientas en la gestión del riesgo.
En la elaboración y uso de estos mapas predominan hoy enfoques fragmentarios, que no
siempre responden a una delimitación de objetivos focalizados. Reflejan más bien la vigencia de
ciertas concepciones reduccionistas y ponen en jaque ciertos avances teórico­conceptuales muy
valiosos. Aunque esto no necesariamente provenga de una intencionalidad deliberada, esta
manera de producirlos ha ayudado a revigorizar una concepción físico­naturalista de los
desastres, basada en la vieja idea de que éstos no son más que amenazas que se consuman con
la contribución de determinadas condiciones peligrosas y factores de .vulnerabilidad física..
Una manera de comprobarlo es revisar los centenares de informes y artículos que aparecen en
Internet sobre el tema. En palabras de Maskrey (1998, p: 35): En muchos casos, el análisis de
riesgos se limita a producir mapas de la distribución espacial y temporal de las amenazas y sus
atributos. Bajo la denominación generalizada de mapas de riesgo se producen mapas de
amenazas sísmicas, de deslizamientos, de inundaciones, etc. El análisis de la distribución,
frecuencia, topología y magnitud de amenazas, sin embargo, representa una evaluación de
amenazas y no de riesgos propiamente dichos, ya que no se toma en cuenta la vulnerabilidad.
Tomando como punto de partida el problema expuesto, se discutirán brevemente, a
continuación, tres cuestiones básicas:
¿Por qué es importante preservar y consolidar, en la producción de estos mapas, una
concepción totalizadora del riesgo?
Para responder a esta pregunta hay que remontarse a algunas cuestiones de fondo. La evidente
diversidad conceptual que prevalece en la teoría sobre los riesgos de desastre no equivale a una
simple .dispersión terminológica. Aunque ciertamente inciden en ella ciertos reflujos y modas, y
una insuficiente comunicación entre saberes, el problema fundamental radica en la
configuración de un denso pluralismo teórico, producido por la convergencia de múltiples
disciplinas que tienden a capturar trozos de dicho objeto de conocimiento, no pocas veces con
pretensiones hegemónicas, y que por añadidura vienen a la cita con sus propias divergencias
epistemológicas internas. Por lo mismo, una improbable uniformidad semántica pintaría un
consenso aparente y la supresión de diferencias de pensamiento que son inherentes al quehacer
científico sería aquí, como en cualquier otro terreno, imposible.
¿Qué es una amenaza?
Es la probabilidad de ocurrencia de un fenómeno natural o inducido por el hombre
que puede ocasionar graves daños a una localidad o territorio. Las principales
amenazas a las que estamos expuestos en Villa La Angostura son los terremotos,
sequías, inundaciones, incendios forestales, aluviones, deslizamientos, lahares
secundarios, nevadas, heladas, licuefacción, tsunamis y erupciones volcánicas.
¿Qué es la vulnerabilidad?
Es el conjunto de condiciones ambientales, sociales, económicas, políticas y educativas
que hacen que una comunidad esté más o menos expuesta a un desastre, sea por las

262
condiciones inseguras existentes o por su capacidad para responder o recuperarse ante
tales desastres.
La vulnerabilidad de una comunidad cambia continuamente con las fluctuaciones de la
población, la construcción de nuevas viviendas, carreteras, instalaciones industriales y
otras infraestructuras. El grado de vulnerabilidad de una población expuesta a una
amenaza puede ser reducido si es que se diseñan acciones de preparación para las
emergencias o si se reducen las condiciones de riesgo existentes mediante las políticas
y estrategias de desarrollo local.

El principio básico es: «menos vulnerabilidad, menos desastres».

Factores que inciden en la vulnerabilidad Físicos


Localización de poblaciones con respecto a una amenaza o en zonas de riesgos, como el
cauce de los ríos o en zonas inundables, en las cuales influyen factores como la
pobreza, el desconocimiento o la falta de alternativas para su reubicación.

Técnicos
Construcciones inadecuadas, edificadas sin respetar las pautas técnicas o que se
encuentran en estado de deterioro. Muchas de estas construcciones son consecuencia
del incumplimiento de las normas y procedimientos existentes en las municipalidades
y otras por la ausencia de tales procedimientos. La licencia de construcción debe ser un
requisito a cumplir antes del inicio del levantamiento de la vivienda.

Ecológicos
Debilitamiento y/o destrucción de las reservas o recursos del ambiente (agua, suelo,
flora, fauna, biodiversidad) y ecosistemas naturales. Por ejemplo, la deforestación
aumenta la fragilidad frente a las lluvias y provoca erosión, deslizamientos,
derrumbes, inundaciones o avalanchas.

Económicos
Se refiere a cómo se usan los recursos económicos o la ausencia de ellos para las
acciones de prevención. La pobreza de las poblaciones aumenta los riesgos de
desastres. Los más pobres son siempre los más expuestos a los desastres y sus impactos
negativos pues, por lo general, ocupan zonas en riesgo y disponen de viviendas con
construcciones deficientes.

Sociales
Se refiere a la carencia de redes sociales y liderazgos capaces de generar cohesión y
capacidad para reducir los riesgos o responder adecuadamente a las emergencias.

Políticos
Grado de descentralización de las decisiones y fortaleza de las instancias locales,
participación de la población, representatividad y autonomía de las instituciones, para
acciones de prevención o respuestas a los desastres.

263
Culturales
Autoestima colectiva, sentido de pertenencia a una comunidad, identidad nacional,
regional y local. En muchas comunidades se asumen los desastres como hechos que
van a ocurrir de todas maneras, lo que reduce el esfuerzo para prevenir los riesgos;
mitos que tenemos sobre la ocurrencia de los desastres, lo cual no permite plantear
acciones para la prevención o respuesta oportuna.

Educativos
Limitada calidad de la educación e insuficiente incorporación dentro de los programas
de estudio de las temáticas de gestión de riesgo, protección ambiental o preparación
para emergencias.

Dimensiones de la vulnerabilidad
La vulnerabilidad está determinada por causas estructurales, procesos sociales y
condiciones inseguras que interactúan entre sí.
El siguiente cuadro4 explica las dimensiones de la vulnerabilidad:
Entrañan una significativa vulnerabilidad la ausencia de evaluaciones de riesgo en los
programas y proyectos de desarrollo, la ineficacia e ineficiencia de la normatividad
vigente para preservar la seguridad ciudadana, la centralización de las decisiones
políticas y administrativas y el limitado apoyo a las iniciativas e institucionalidad local
para prevenir o responder a situaciones de desastre. La desinformación, la carencia de
responsabilidades ciudadanas, el asistencialismo, la ausencia de horizontes de
desarrollo y progreso, el predominio de actitudes autoritarias y la exacerbación del
individualismo condicionan la vulnerabilidad en la dimensión cultural. La ocupación
de espacios anegadizos, la construcción sobre terrenos inestables, el deterioro de las
edificaciones y la ausencia y deficiencia de medidas de protección contribuyen a
acentuar la inseguridad física.
Son más vulnerables a los desastres los segmentos pobres de la población porque ven
limitado o prácticamente prohibido su acceso a terrenos y viviendas seguras, a la
información y educación y, en general, a los recursos para prevenir, prepararse para
enfrentar emergencias o para recuperarse de ellas.

¿Qué es el riesgo?
Es la probabilidad de que el desastre suceda como consecuencia de la combinación de
las amenazas con las condiciones de vulnerabilidad. El riesgo puede ser estimado por
el probable número y características de pérdidas humanas, heridos, propiedades
dañadas e interrupción de actividades económicas que podría producirse luego de un
desastre.
Todos los desastres van construyéndose o formándose antes de su ocurrencia con el
desarrollo de las condiciones de riesgo. De un lado se generan las amenazas tanto por
los cambios naturales en nuestro planeta como por la creciente influencia de las
actividades humanas: la contaminación que provocan algunas grandes empresas
multinacionales está incidiendo sobre los cambios de clima en el planeta, agudizando
las sequías y fenómenos climáticos como El Niño; la ocupación (para fines de vivienda
o agrícolas) y modificación de los cauces de los ríos y quebradas; la erosión de los
suelos a consecuencia de prácticas inadecuadas en la minería, agricultura y ganadería;
y la destrucción acelerada de los bosques que contribuye aún más a la erosión de los

264
suelos e inestabilidad de las laderas. De otro lado, la vulnerabilidad de las personas ha
tendido a incrementarse en nuestro país con el crecimiento de las ciudades en torno a
las actividades productivas más rentables, como es el caso de la agricultura y la
industria en la costa o la minería en la sierra; la ubicación de carreteras y centros
poblados cerca de los cauces de los ríos, la ocupación de terrenos de mala calidad para
usos de vivienda, la construcción de viviendas sin la adecuada regulación y dirección
técnica, la construcción de locales de uso público en lugares inseguros, la debilidad de
las instituciones públicas y privadas para incorporar en sus planes y políticas las
estrategias para reducir los riesgos que afectan, por ejemplo, la seguridad de los niños
y maestros en las escuelas tanto por la insuficiente formación sobre los riesgos de
desastres como por la deficiente calidad de las instalaciones.
Un aspecto realmente clave para la reducción de los riesgos es la información y la
educación de la comunidad. En casi todos los desastres la mayoría de las víctimas
podrían haberse salvado con un comportamiento adecuado que se logra con el
concurso de los medios de comunicación y de las instituciones educativas. Las
condiciones de riesgo tienden a crecer por la insuficiente vinculación de las
autoridades municipales con los ciudadanos y del gobierno central con los gobiernos
locales y regionales.
El riesgo puede ser parcialmente dimensionado y zonificado, sea mediante
evaluaciones hechas por la propia comunidad organizada o por estudios con diversos
grados de complejidad. Los datos relativos a los riesgos que pueden ser medidos o
estimados cuantitativamente son la frecuencia y los daños producidos por desastres
anteriores y el número de personas, viviendas y locales públicos que pueden ser
afectados. Los datos que pueden expresarse en mapas son la localización de eventos
peligrosos, la ubicación de poblaciones, instituciones e instalaciones (colegios, fábricas,
instalaciones de agua, desagüe y electricidad) en zonas de mayor o menor riesgo. Pero
hay otro tipo de datos que solo puede expresarse de manera cualitativa, como las
relaciones sociales o familiares afectadas, pérdida de valores culturales, pérdida de
relaciones de vecindario, problemas emocionales y cambios en las relaciones de poder.

LOS DESASTRES

Cuando un fenómeno destructivo actúa sobre condiciones de vulnerabilidad


produciendo graves daños contra la vida y los bienes de las personas o interrumpiendo
por ello el normal funcionamiento de la sociedad se produce un desastre.
Normalmente un desastre causa grandes pérdidas humanas, materiales, ambientales,
culturales y económicas. Además, provoca gran sufrimiento en las personas. La
comunidad afectada no puede seguir adelante por sus propios medios, requiere de la
ayuda nacional y/o internacional.
El impacto de los desastres no debe ser medido solo en función de la valorización
monetaria de los daños. Es necesario tener en cuenta la valoración social de tal
impacto, las capacidades de rehabilitación y reconstrucción y, por lo tanto, las
desigualdades sociales y el sistema de relaciones entre lo local, regional y nacional.
Mientras que en un desastre urbano puede resultar más determinante la destrucción de
viviendas, en uno rural lo puede ser la destrucción de los medios e infraestructura
productiva. Aunque en el ámbito local o regional los daños pueden tener un valor

265
monetario similar, la capacidad o posibilidad de reposición puede variar en función de
la concentración y centralización de las decisiones.
La valorización económica de los daños en las ciudades tiende a ser mayor que en el
campo porque allí se concentra más infraestructura, recursos productivos y de
consumo. En las regiones con mayor infraestructura productiva la valorización de los
daños tenderá a ser mayor que en las regiones con menor infraestructura. En países
donde se concentra la riqueza el valor económico de los daños tenderá siempre a ser
mayor que en los países donde se concentra la pobreza. La cuantificación del daño
económico es al desastre, lo que el ingreso per cápita es a la sociedad. Por lo general,
los desastres son consecuencia de las decisiones que la gente toma acerca del desarrollo
y del manejo de su entorno natural y social. Todos los desastres pueden ser
minimizados o evitados si las comunidades adaptan sus estilos de vida y plantean su
desarrollo teniendo en cuenta los peligros que provienen de la naturaleza y de las
formas de vida sustentadas en el deterioro del medio ambiente. Pero los desastres
pueden causar más destrucción y muerte si las personas no están suficientemente
preparadas para responder ante ellos.

LA GESTIÓN DE RIESGO

Concepto:
Podemos entender que «la gestión de riesgo es el proceso planificado, concertado,
participativo e integral de reducción de las condiciones de riesgo de desastres de una
comunidad, de una región o de un país, íntimamente ligado a la búsqueda de su
desarrollo sostenible. Requiere principalmente de la integración de este enfoque en los
programas y proyectos de desarrollo y de la intervención integral de cada uno de los
actores involucrados en él».

¿Por qué planificado?


Porque requiere del engranaje básico de las ideas, de los intereses y las expectativas de
los actores, del establecimiento de prioridades sobre las propuestas de intervención y,
principalmente, del reconocimiento de las responsabilidades de cada actor que
interviene.
Por otro lado, se necesita ordenar el uso y ocupación del territorio, mejorar las
relaciones con nuestro ambiente, cambiar actitudes, articular capacidades. Todo ello
requiere un proceso organizado y planificado.

¿Por qué participativo y concertado?


Porque al ser el problema parte del proceso de desarrollo local, tanto la generación de
la condición del riesgo como la solución a su problemática requieren del
involucramiento total de las instituciones y organizaciones comunales y regionales.

¿Por qué integral?


Porque reconociendo que los desastres no son producto de fuerzas externas a la
población sino que son generados por el desequilibrio en nuestro desarrollo (social,
económico, cultural, político, ambiental), las propuestas de intervención deben ser
igualmente integrales. Por lo tanto, éstas no deben orientarse solo a la capacitación,

266
construcción de obras físicas u organización, sino que deben articularse en propuestas
complementarias que apunten a un objetivo común: el desarrollo integral y sostenible.
Los componentes básicos y los principios Allan Lavell resume los principios y los
componentes básicos del proceso de gestión de riesgo en:

Los componentes básicos:

a. Toma de conciencia, sensibilización y educación sobre el riesgo.


b. Análisis de los factores y las condiciones de riesgo existentes o posibles.
c. Análisis de los procesos que generan riesgo e identificación de los actores
responsables o que contribuyen a acrecentarlo.
d. Identificación de opciones de reducción del riesgo, de los factores e intereses que
obran en contra de la reducción, de los recursos posibles.
e. Proceso de toma de decisiones sobre las soluciones más adecuadas en el contexto
económico, social, cultural, político y ambiental.
f. Monitoreo permanente del entorno y comportamiento de los factores de riesgo.

¿Qué es una emergencia?


Es la alteración o interrupción intensa y grave de las condiciones normales de
funcionamiento u operatividad de una comunidad causada por la inminencia de un
evento destructivo o por un desastre en gestación que requiere de una reacción
inmediata, que exige la atención o preocupación de las instituciones del Estado, los
medios de comunicación y de la comunidad en general. Las emergencias no siempre
terminan en desastre ya que después de reconocidas y declaradas puede ocurrir que el
fenómeno natural no se presente o que, por su baja magnitud, los efectos sean poco
importantes.

LAS RELACIONES ENTRE RIESGO Y DESASTRE

Reducir riesgos para alcanzar un mayor desarrollo económico y social9


La reducción de los riesgos debe ser asumida como una cuestión central de la gestión
del desarrollo.
No será posible el desarrollo si los procesos orientados a este fin vienen acompañados
del aumento de los niveles de riesgo.
El riesgo es una condición latente que implica la posibilidad de pérdidas. Puede
entenderse también como «cálculo de costo y beneficio a obtener en tiempos
determinados». En este marco, la oportunidad es lo importante: Decidir qué beneficio
logro al prevenir, qué costo tendré que pagar por no hacerlo.

DESASTRES Y DESARROLLO
El análisis de las relaciones entre desastre y desarrollo puede hacerse desde dos
perspectivas:
Impacto de los desastres en los procesos y las capacidades existentes para lograr el
desarrollo local y nacional. En esta mirada hay que responder cuánto influyen en el
desarrollo local y nacional los daños que se producen por la ocurrencia de los

267
desastres. El análisis queda, por lo tanto, focalizado en el hecho en sí y no alrededor de
las causas que contribuyeron a que los daños producidos sean de una magnitud
determinada, significando un retroceso o estancamiento para el desarrollo. Este
enfoque ha sido utilizado en la lógica de dimensionar las pérdidas para captar fondos
económicos de reconstrucción.
Impacto de los procesos de desarrollo económico en la construcción de condiciones
de riesgo que favorecen futuros desastres. En esta perspectiva debemos mas bien
señalar en qué medida los modelos de desarrollo económico y social, impulsados sin
tomar en cuenta el equilibrio naturaleza­sociedad, influyen de manera directa en la
construcción de las condiciones de riesgo, donde se puede predecir que si las cosas
siguen igual se lamentarán nuevos desastres. Los desastres son una de las principales
causas de interrupción del desarrollo de las comunidades y los países. Esta afirmación
vale para los grandes eventos desastrosos y también para los de menor escala pero de
presencia recurrente. Los análisis evidencian que los desastres influyen de manera
negativa en el desarrollo local a través de diversas formas:

a. Destrucción de la producción
Daños en infraestructura: vías de comunicación (carreteras, caminos, puentes),
servicios (energía, fuentes de agua), pérdida de producción (cultivos).
b. Pérdida de oportunidades
En situación de desastre los inversionistas buscan otros países o regiones para invertir
dada la inseguridad generada por el desastre.
c. Desvío de recursos económicos
Recursos económicos previstos para otros proyectos deben destinarse para la
reconstrucción de las zonas afectadas.
d. Impacto en la deuda externa
Ante los daños generados, los gobiernos se ven obligados a tramitar préstamos
internacionales para la recuperación de la infraestructura dañada.
e. Generación o agudización de conflictos
Se agudizan los conflictos ya existentes o se generan nuevos porque se rompen los
pactos de convivencia entre los actores locales.
f. Cambios y alteraciones en la dinámica social
Se presentan fenómenos sociales como migración por desarraigo, delincuencia,
alcoholismo, drogadicción y traumas a la salud mental (estrés, depresión y ansiedad).
g. Desconfianza de los inversionistas (fuga de capitales). Traslado de capitales a sitios
que ofrecen mejores opciones. Esto determina una baja en el crecimiento de la
economía.

LA CONSTRUCCIÓN SOCIAL DEL RIESGO


El riesgo no existe por sí mismo. Los seres humanos intervenimos sobre él. Hacemos
más o menos graves las amenazas, aumentamos o reducimos lo que nos hace
vulnerables. Convertimos los territorios y comunidades de las que formamos parte en
riesgosas o no riesgosas. Un desastre es la realización o concreción de las condiciones
de riesgo preexistentes. Esta realización ocurre en el momento en que un determinado
evento físico ocurre y lo convierte en un producto, con consecuencias de pérdidas y
daños. Las condiciones inseguras no aparecen espontáneamente sino que, como ya
hemos visto al referirnos a los riesgos, derivan de procesos humanos (sociales,

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políticos, económicos) llamados «estilos» o «modelos» de desarrollo. Los desastres son
indicadores de sostenibilidad en los procesos de gestión del desarrollo. En
consecuencia, la reducción del riesgo debe fundamentarse en la modificación o
transformación de las condiciones que generan el riesgo.
Un aspecto central en las condiciones de riesgo es la situación de los derechos de las
personas, en particular los derechos económicos, sociales y culturales que determinan
el nivel de acceso a las decisiones y recursos que posibilitan el desarrollo integral de las
personas. Ello porque muchas de las condiciones de vulnerabilidad van a ir
generándose en razón del acceso a la información sobre los riesgos existentes y la
manera de reducirlos; por la falta de acceso a una vivienda digna y segura muchas
veces condicionada por la pobreza; por la falta de acceso a servicios básicos como el
agua y desagüe, indispensables para evitar epidemias después de la ocurrencia de
sismos o inundaciones; por la falta de mecanismos de participación que le ayuden a ser
parte de las soluciones de los problemas y no solo parte de éstos.
La ubicación de la población de escasos recursos en zonas físicamente inestables o
sitios de ocurrencia normal de deslizamientos, crecidas o fenómenos de gran impacto,
así como las formas inseguras de construir, son producto de procesos de marginación
del mercado de tierras formales y seguras y la falta de acceso a sistemas y materiales de
construcción adecuados a las condiciones ambientales.
Las altas tasas de deforestación equivalen a un proceso de empobrecimiento de las
condiciones de vida del entorno. Lo mismo el agotamiento del suelo agrícola. La falta
de organización social de la población y de participación directa en la toma de
decisiones sobre el rumbo de sus propias vidas los hace menos preparados para
afrontar amenazas y hacerse menos vulnerables. Esos mecanismos son construidos por
la sociedad en el curso de sus procesos de cambio y transformación.

Características de la gestión de riesgo


La gestión de riesgo no debe ser vista solo como una técnica de reducción del riesgo,
sino que debe, además, convertirse en un instrumento para la participación de los
grupos representativos de un conglomerado social. La gestión de riesgo no es
simplemente bajar la vulnerabilidad, sino llegar a establecer acuerdos sociales que
hagan perdurables y concientes cada logro. La gestión de riesgo significa que el
aprovechamiento de los recursos naturales y del ambiente en general debe
desarrollarse en condiciones de seguridad dentro de los límites posibles y aceptables
para la sociedad.

Por lo expuesto, la gestión de riesgo:

a) No puede ser reducida a la idea de una obra o una acción concreta como una pared
de retención para impedir deslizamientos o inundaciones.
b) No puede obviar el aspecto educativo­informativo que hace que todos sepan los
peligros que enfrentan y las vulnerabilidades que los agravan.
c) No puede perder de vista el contexto y el entorno en el que existe el riesgo, para
buscar las soluciones más adecuadas. La gestión de riesgo es un proceso específico
para cada realidad.
d) Es, además, un proceso que debe ser asumido por todos los actores de la sociedad y
no solamente por el Estado.

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e) El proceso debe estar influido por la idea de «riesgo aceptable», es decir, el nivel de
protección que es posible lograr y que se considera pertinente en las circunstancias
económicas, sociales, políticas y culturales existentes.
f) No puede existir como actividad aislada y debe atravesar horizontalmente todos los
procesos y actividades humanas.
El objetivo final de la gestión de riesgo es garantizar que los procesos de desarrollo se
den en condiciones óptimas de seguridad.

Reducción de la vulnerabilidad de la estructura social de una comunidad

Reducir la vulnerabilidad de la estructura social de una comunidad es la más difícil de


las medidas de mitigación. En la mayoría de los casos, esto se logra mejor extendiendo
el trabajo normal de desarrollo en una de tres maneras. La primera es el fortalecimiento
institucional. Se puede identificar y fortalecer las organizaciones locales que sirven
como mecanismos de adaptación. Se puede hacer un esfuerzo conciente para mejorar
sus capacidades y destrezas, aumentando así su habilidad de lidiar con una crisis.
La segunda actividad consiste en aumentar el número de mecanismos de adaptación
dentro de una comunidad. Al desarrollar instituciones formales y enlazar estos grupos
con recursos externos, se establece un vehículo para la intervención y la provisión de
asistencia. La tercera actividad es ampliar los contactos de los grupos locales y
promover aquello que lleve a la cooperación entre los diferentes elementos o grupos
dentro de la sociedad. Dicha cooperación puede reducir el impacto social de un
desastre.
En sus actividades de desarrollo, las agencias deberían ser cuidadosas en evitar
cualquiera que aumente o institucionalice la vulnerabilidad de una sociedad. Es
especialmente importante identificar las relaciones de dependencia, en particular las
que se vean amenazadas en un desastre y trabajar para eliminarlas.
Al aumentar la autosuficiencia y la fiabilidad de los recursos internos, las agencias
mejoran la capacidad de los residentes locales de adaptarse después de un desastre.
Este puede ser un factor mitigante y puede ayudar a acelerar la recuperación.

Participación en la mitigación

La mitigación de desastres es responsabilidad de todas las organizaciones que trabajan


en un área amenazada. A menudo ha existido la tendencia de dejar las medidas de
mitigación a los gobiernos o a las organizaciones intergubernamentales. Las agencias
voluntarias, sin embargo, tienen un rol importante que jugar, especialmente en reducir
la vulnerabilidad económica y de la estructura social. Al reconocer la amenaza de
desastre, las organizaciones pueden incluir medidas correctivas en muchas de sus
actividades normales de desarrollo. Se ha dicho que casi cualquier buen programa de
desarrollo puede tener un efecto positivo en la mitigación de desastres. De hecho,
muchas de las actividades que se han llevado a cabo bajo programas normales de
desarrollo lo han logrado. Por ejemplo, la introducción del trigo a la India en las
décadas de 1960 y 1970, no sólo mejoró el balance nutricional, sino que también ayudó
a diversificar la agricultura y a reducir la posibilidad de una hambruna generalizada
debido a la pérdida de la cosecha de arroz por factores climáticos o por una infestación
de insectos. En Guatemala, el establecimiento de programas de ahorro y préstamo por

270
parte del movimiento cooperativo mitigó el impacto económico de los desastres y
otorgó a los que sufrieron pérdidas por el terremoto una reserva de dinero que podía
ser comprometido para la reconstrucción. Sin esta reserva de efectivo y su
disponibilidad inmediatamente después del desastre, el tiempo de recuperación se
habría prolongado.
Estas medidas de reducción de la amenaza deberían ser tomadas en consideración en
la administración de la asistencia general para el desarrollo (Krimgold 1974). Se puede
asumir el liderazgo en mitigación en vivienda, agricultura, desarrollo económico,
desarrollo urbano y regional, planificación territorial y organización comunitaria. Se
debe recordar, sin embargo, que las actividades de mitigación incluidas en los
programas normales cuestan relativamente poco, pero la mitigación retroactiva,
especialmente en asentamientos y edificios, es muy costosa.

Errores comunes en la mitigación

A continuación algunos de los errores más comunes que cometen las agencias cuando
están lidiando con mitigación:
1. Asignar la responsabilidad de ciertas actividades de mitigación al tipo equivocado de
organización. Por ejemplo, algunos países han asignado responsabilidades de
mitigación física a agencias de servicio social. Es importante determinar la función
particular de la actividad de mitigación y asignarla a una agencia con las
responsabilidades, intereses y capacidades adecuadas.
2. Exceso de dependencia de mitigación pasiva en vez de activa. Muchos países han intentado
seguir el modelo de las sociedades industrializadas y han aprobado legislación estricta
con la esperanza de que estas medidas promuevan la mitigación. Para los países en
desarrollo se debe enfatizar el uso de medidas de mitigación activa.
3. Fallo en determinar la gama completa de opciones. La mitigación es un compromiso
complejo y existen muchas opciones. Las agencias deberían tener el cuidado de
examinar el espectro completo y seleccionar una mezcla de estrategias para lidiar con
la reducción de la vulnerabilidad y no darse por satisfechas con la selección de un solo
enfoque.
4. Fallo en identificar todas las amenazas de desastre. La mayoría de las comunidades están
amenazadas por más de un solo tipo de desastre. En áreas como el Caribe, donde los
huracanes son considerados una amenaza anual, es fácil olvidar que los terremotos, los
volcanes y las inundaciones regionales también representan amenazas. Los países
deben asegurarse de determinar todas las amenazas potenciales y diseñar sus
programas de mitigación de acuerdo a éstas. 5. Fallo en relacionar la reducción de la
vulnerabilidad con los planes y actividades normales de desarrollo. Como se enfatizó
anteriormente, la reducción de la vulnerabilidad tendrá poco impacto a menos que se
lleve a cabo de manera concertada con las actividades normales de desarrollo. En
muchos casos, la mitigación sólo será factible si se enfatizan los aspectos de desarrollo.

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Las recientes inundaciones y deslizamientos que han afectado a Venezuela y varios de
sus centros urbanos, incluyendo la ciudad capital de Caracas, vienen irónica y
trágicamente al final de una década nombrada por las Naciones Unidas, el Decenio
Internacional para la Reducción de los Desastres Naturales. Resaltaron una vez más
que se ha hecho realmente poco, para reducir el riesgo de los desastres, y también
reforzaron la noción de que los desastres no son naturales, a pesar del nombre dado a
la Década. Los múltiples desastres, urbanos y rurales, asociados con las intensas lluvias
sufridas en Venezuela, marcan el fin de una serie de desastres en el ámbito urbano
experimentados durante la presente década. Estos desastres incluyen los de Northridge
en Los Angeles, de Kobe en Japón en 1994 y de Turquía en 1999, vinculados con
terremotos, y los impactos severos sufridos en áreas urbanas, con ocasión de los
Huracanes George en las Antillas y Mitch en Centroamérica, durante octubre y
noviembre de 1998. Mitch impactó más de 80 centros urbanos en Honduras de los
cuales más de 20 sufrieron severos danos, incluyendo de forma notoria, la ciudad
capital de Tegucigalpa. Faltaba poco para que las inundaciones del río Mississippi y el
Huracán Andrew en Florida se convirtieran en desastres urbanos de gran magnitud.
Durante la década muchas ciudades del mundo sufrieron otros múltiples desastres
asociados a una gran variedad de agentes físicos de índole natural, social, o
tecnológica. Desde épocas anteriores, América Latina ha sido testigo de desastres
urbanos de grandes dimensiones. Centroamérica ha recibido su cuota de eventos
desastrosos, incluyendo la severa destrucción sufrida en las ciudades de Guatemala,
San Salvador, Managua y Limón durante los últimos treinta anos a raíz de sismos de
considerable magnitud. La población y economía mundial son hoy en día
predominantemente urbanas. En América Latina más del 75 por ciento de la población,
habita espacios urbanos de diversos tamaños. La concentración de la economía, de la
cultura, de la inversión y del poder político es aún más acentuada. La mayoría de las
megaciudades del mundo están ubicadas en áreas de gran amenaza física, como lo son
infinitos números de ciudades de tamaño intermedio y pequeño. En los países en vías
de desarrollo estas ciudades están tipificadas por niveles altos y crecientes de
vulnerabilidad social, vulnerabilidad que encuentra su expresión también en las
ciudades de los países avanzados, como Kobe y Andrew bien ilustraron. Y esta
vulnerabilidad no solamente se expresa en términos de los impactos sufridos, sino
también en lo débil de los esquemas de respuesta y las dificultades experimentadas en
la rehabilitación y la reconstrucción, tanto en países atrasados como los supuestamente
avanzados.
Sin lugar a dudas el problema de desastre urbano es sumamente serio. Esta idea es
válida tanto en el contexto histórico como en el actual. Y tiende a aumentar su
gravedad con el paso del tiempo y el inexorable aumento en la concentración urbana,
producto de
procesos económicos y de cambio social aparentemente irreversibles, los cuales
requieren de la concentración urbana, aún cuando sea en formas distintas a las
experimentadas históricamente. Sin embargo, ha faltado atención suficiente al
problema, tanto por parte de los investigadores y practicantes del desarrollo y
planificación urbana, como por parte de quienes se dedican a los riesgos y desastres.
(ver Lavell, 1996: Mitchell, 1999). Solamente durante la presente década se ha
experimentado un aumento importante en la investigación y discusión en torno al
problema, pero aún queda muy lejos de lo deseado y necesario. Una serie de

297
explicaciones para esta situación y una reseña comprensiva de la literatura sobre el
tema, puede encontrarse en la excelente compilación de estudios recientemente
publicada y editada por James Mitchell, Crucibles of Hazards: Mega­Cities and
Disasters in Transition (Mitchell, 1999). El problema de riesgo y desastre urbano nos
remite a una indagación y reflexión que gira en torno a tres tipos de problema, los
cuales están de por sí irremediablemente relacionados. Primero, el problema de los
factores causales, que tienden a aumentar, y explican el riesgo en las ciudades y su
naturaleza cambiante; segundo, el problema de la respuesta social a los desastres una
vez ocurridos, y los condicionantes impuestos por las características multifacéticas de
las ciudades como entornos de acción: y, tercero, la problemática de la reconstrucción
en el entorno urbano. La discusión de estas tres vertientes debe permitir la
identificación de opciones reales para la reducción de la vulnerabilidad de las ciudades
hacia el futuro y para el mejoramiento de los sistemas de respuesta. Este documento
resume algunos de los principales factores a considerar, en la problemática del desastre
urbano, que inevitablemente nos remite al concepto de riesgo, y a una consideración de
las formas en que el riesgo se construye a través de los procesos sociales llamados
“urbanos”. Sin riesgo no puede haber desastre. Comenzaremos nuestro resumen con
este punto álgido. Las características del riesgo inciden no solamente en la naturaleza y
distribución social del daño, sino también en los desafíos presentes con la respuesta
pos impacto y las modalidades de reconstrucción implementadas.
Construcción Social del Desastre
El riesgo, o la probabilidad de daños y pérdidas, es un concepto fundamental que
supone la existencia de dos factores: amenazas y vulnerabilidades. Con la idea de
amenaza se refiere a la probabilidad de la ocurrencia de un evento físico dañino para la
sociedad; la vulnerabilidad refiere a la propensidad de una sociedad o elemento de la
sociedad de sufrir daño. El riesgo se crea en la interrelación o intersección de estos dos
tipos de factores, cuyas características y especificidades son sumamente heterogéneas.
Aún cuando para fines analíticos se suelen separar estos dos factores, estableciendo
una aparente autonomía de ambos, en la realidad es imposible hablar de amenaza sin
la presencia de vulnerabilidad y viceversa. Para que haya una amenaza tiene que haber
vulnerabilidad. Si no existe una propensidad de sufrir daño al encontrarse frente a un
evento físico determinado, no hay amenaza, sino solamente un evento físico natural,
social o tecnológico sin repercusiones en la sociedad.
Respetando la idea de que la división de los factores de riesgo en amenazas y
vulnerabilidades es una conveniencia analítica que simplifica la realidad dinámica y
dialéctica encerrada en la interpelación de ambos, podemos resumir las características
de estos dos tipos de factores, en lo que se refiere al problema del riesgo urbano, de la
siguiente manera.

Amenazas: (ver, Lavell, 1996)

Amenazas Naturales: la ubicación originaria de un número importante de los centros


urbanos a escala mundial se explica por su proximidad a diversos recursos naturales,
aún cuando, con cambios en las estructuras y lógicas económicas y en las tecnologías
de comunicación y transporte, estos factores hayan perdido peso con el paso del
tiempo. La proximidad a mares, océanos, lagos y ríos o a depósitos de minerales; y la
ubicación en valles intermontaños tectónicos o en las faldas de volcanes, entre otras, se

298
explica por el acceso a recursos que facilitan el transporte de bienes, la producción
pesquera, agrícola o industrial y la interrelacion comercial y poblacional en general. Sin
embargo, por el mismo proceso de la naturaleza, los recursos que ofrecen
oportunidades para la vida humana se convierten en distintos momentos en amenazas
para ella misma y sus creaciones. Los mares y océanos normalmente benignos, se
convierten en amenazas por la presencia cíclica de huracanes y tormentas tropicales,
mareas altas combinadas a veces con descargas fluviales anormales, y la probabilidad
de un aumento en sus niveles por el impacto del cambio climático global y el efecto
invernadero; factores que condicionan la existencia de inundaciones de gran escala,
erosión costera y vientos de alta velocidad. Los ríos que ofrecen oportunidades de
producción, acceso a agua y medios de transporte y aspectos estéticos de gran valor,
además de la refertilizacion natural de sus zonas de inundación, cíclicamente producen
inundaciones de magnitudes anormales que ponen en peligro a la comunidad
establecida en sus proximidades. Las faldas de los volcanes que proveen importantes
recursos edáficos y minerales, se transforman en lugares de peligro frente a la
posibilidad de la renovada actividad volcánica.
La relación dialéctica entre recursos y amenazas es consustancial con el desarrollo de la
tierra y de la sociedad. La tierra es por naturaleza un lugar a veces peligroso. La
amenaza natural, asociada con los procesos geológicos, geomorfológicos, climáticos, y
oceanográficos tiende a ser una constante en términos de un número importante de los
centros urbanos grandes, medianos y pequeños del mundo. Debido a los procesos
contradictorios del crecimiento urbano, ésta aumenta, pues los centros urbanos se
expanden hacia zonas de mayor peligrosidad, excediendo los límites de las áreas más
seguras, que adoptaron los primeros pobladores para asentarse.. Visto desde esta
perspectiva, es claro que hasta los eventos físicos extremos asociados a procesos
naturales pueden transformarse en amenazas, solamente por intermediacion humana,
lo cual significa que el concepto mismo de amenaza es socialmente construido.
Amenazas Socionaturales: Los procesos y eventos naturales establecen límites o
fronteras “naturales” al desarrollo de la sociedad y de las ciudades. Son inmutables, en
gran medida, a pesar de que la tecnología permite, en determinadas circunstancias,
una modificación de su comportamiento e impacto en la sociedad, como es el caso con
la construcción de presas, diques, paredes de retención etc.
Sin embargo, existe una serie creciente de eventos físicos que afectan a las ciudades,
que aparentan ser naturales, pero en su esencia son creados por la intervención
humana.
Estos eventos se gestan en la intersección de la sociedad con los procesos de la
naturaleza, y pueden convenientemente denominarse eventos o, en su caso, amenazas
socionaturales. Aquí se trata, en particular, de los casos de inundaciones,
deslizamientos, hundimientos y de sequías que afectan a muchas ciudades,
particularmente en los países pobres, cuyos orígenes se encuentran en el inadecuado
manejo del entorno natural de la ciudad y de su región circundante. La construcción de
la ciudad implica automáticamente un cambio en los sistemas ecológicos y ambientales
originarios. El ambiente natural se transforma en un ambiente construido, o social. La
conversión de suelos naturales en tierras urbanas significa la remoción de la cobertura
vegetal natural y su sustitución con asfalto, cemento u otros materiales industriales.
Esto inevitablemente cambia la dinámica de las descargas pluviales y la dinámica
fluvial de los ríos “urbanos”, con graves consecuencias en términos de inundaciones, si

299
el proceso natural de control pluvial y fluvial no es compensado por la construcción de
adecuados sistemas de drenaje urbanos. El minado, tanto de materiales para la
construcción, como del agua subterránea, para proveer la ciudad de recursos y medios
para su crecimiento, conduce muchas veces a procesos de hundimiento, deslizamiento
o de sequía urbana. La contaminación de aguas, tierras y aire, por deshechos
industriales y domésticos, transforman los recursos en amenazas para la vida humana,
minando las bases de la salud y de la productividad del medio. Pero, a diferencia de
los eventos de verdaderas características naturales, son previsibles y prevenibles a
través de la acción humana planificada, consciente del impacto negativo de la
transformación social sobre el ambiente.
Las Amenazas Tecnológicas: La ciudad y los centro urbanos en general son el lugar de
asentamiento privilegiado de las facilidades de producción modernas y artesanales y
los nodos del tránsito y transporte en el ámbito local, regional, nacional e internacional.
El uso de tecnologías modernas y artesanales en la producción y el transporte son
fuente de posibles amenazas por problemas de control, reglamentación o fallas en los
sistemas mecánicos o eléctricos. La incidencia de los llamados “accidentes”
tecnológicos aumenta continuamente en los centros urbanos, creando a veces
condiciones de verdadero desastre. Explosiones, conflagraciones, escapes de materiales
tóxicos, entre otros, son reportados diariamente en ciudades de todas partes del
mundo. Solamente hay que recordar las grandes explosiones en la ciudad de
Guadalajara y en la ciudad de México asociados con la producción petrolera, la
conflagración en un centro comercial en Sao Paulo y en una zona de producción
artesanal de fuegos artificiales en la ciudad de México, durante la presente década,
para reconocer los peligros asociados con el inadecuado uso de la tecnología. Estos
eventos y aquellos como Chernobyl y Bhopal durante los años ochenta, representan el
límite extremo de un tipo de fenómeno que se convierte en una costumbre en las
ciudades y que amenaza con crecer en intensidad en el futuro.
Las Amenazas Sociales: Las ciudades son un locus privilegiado, por el impacto que
tienen por la violencia social de tipo protesta y terrorista. La historia de las últimas
décadas está repleta de incidentes de violencia en ciudades alrededor del mundo, y la
vigilancia ejercida durante las últimas semanas del milenio en ciudades de los Estados
Unidos, en particular frente al temor de ataques terroristas contra edificios y zonas
estratégicas, nos recuerda que aún estamos lejos de eliminar las manifestaciones de
diversos descontentos sociales del medio en que vivimos. La ciudad, por la
aglomeración que significa y el impacto simbólico que representa, siempre será el lugar
privilegiado para diversas formas de manifestación social violenta. Esta se suma a las
amenazas más tradicionales que enfrentan los centros urbanos hoy en día. El contexto
dado por la suma de los diferentes tipos genéricos de amenaza arriba suscintamente
descritos, y con posible impacto en los centros urbanos, se complica por la forma
interactiva en que pueden funcionar en espacios confinados y densamente ocupados.
Mitchell (1999) utiliza un título evocativo para su colección de ensayos, al hablar de
“Crucibles of Hazards”, con lo cual hace alusión a la forma en que las distintas
amenazas presentes en el contexto de las ciudades sufren de formas de concatenación y
sinergia, de transformación y renovación que constantemente complican el proceso de
previsión y control. Sismos y huracanes pueden generar situaciones de conflagración,
derrumbe, de inundación, de ruptura de líneas de transporte o contenedores de
materiales tóxicos, entre otros. La descarga de materiales tóxicos al ambiente puede

300
conducir a sinergias que aumenten el potencial dañino de los productos finales.
Descargas pluviales fuertes, inundaciones y deslizamientos pueden destruir sistemas
de distribución de agua potable y de aguas negras, contaminando los ríos urbanos en
que dependen muchos pobladores urbanos pobres para agua, cocina y limpieza, con
los riesgos de enfermedad y epidemia que esto trae consigo.

Las Vulnerabilidades asociadas al Entorno Urbano

La vulnerabilidad significa una propensidad de sufrir daño, pero a la vez, una medida
de las dificultades que enfrenta una sociedad para recuperarse del daño sufrido. La
vulnerabilidad, en cualquiera de sus distintas expresiones es socialmente construida. A
la vez que se expresa en condiciones de inseguridad, cada expresión es en sí, el
esultado de procesos sociales complejos, íntimamente relacionados con las
modalidades de desarrollo o no desarrollo histórico o actual, de la sociedad bajo
análisis (Ver Blaikie etal, 1996). En el contexto urbano, la vulnerabilidad se relaciona
tanto con la estructura, forma y función de la ciudad, como con las características de
los diversos grupos humanos que ocupan el espacio y sus propios estilos o
modalidades de vida. En lo que se refiere a la capacidad de disminuir la vulnerabilidad
urbana, más importancia se debe asignar a los procesos que contribuyen a su
crecimiento, que a la expresión fenomenológica de su existencia, o sea, las condiciones
concretas de inseguridad que existen. Solamente interviniendo en los procesos de
conformación de la vulnerabilidad tendremos oportunidad real de garantizar futuros
más seguros. Operar sobre las señales externas de la vulnerabilidad, significa reparar
daños ya hechos y consolidados, lo cual termina siendo un proceso sin fin y mayor
esperanza de éxito. Existen seis contextos particulares que permiten comprender la
vulnerabilidad del medio urbano:
La Concentración, la Densidad y la Centralización: Tal vez la característica más
definitoria de lo urbano se relaciona con el grado de concentración y densidad de la
economía y de la población que significa, con predilección para las funciones
económicas y sociales relacionadas con los sectores de la industria manufacturera, el
comercio, los servicios, la cultura y la política. La centralización significa que los
centros urbanos, en distintos grados, dominan en el ámbito local, regional, nacional e
internacional esas mismas funciones concentradas. Tanto la concentración como la
centralización son productos de modalidades de desarrollo económico y político que
las han favorecido en los contextos históricos, de los últimos dos siglos. Tales contextos
de concentración y centralización bajo modalidades de alta densidad significan una
vulnerabilidad de altas proporciones en lo que se refiere a los peligros de daños
extensos a la economía y población en el caso de desastre. La densidad de población,
economía e infraestructuras concentrados en espacios limitados, garantizan elevadas
pérdidas en caso de impactos de grandes proporciones. En la medida en que un centro
urbano particular centraliza las funciones económicas, sociales y políticas de una
región, zona, país o internacionalmente, la vulnerabilidad se ve acentuada ante tal
concentración, por el impacto que la destrucción o daño sufrido podría tener para el
espacio mayor en su conjunto.
La Complejidad y la Interconectividad de la Ciudad: Los centro urbanos comprenden
sistemas cuya complejidad aumenta conforme lo hace el tamaño de la ciudad. Este

301
Relevamiento edilicio de Villa La Angostura, en rojo los lotes con edificaciones sin
declarar (y por ende edificadas sin supervisión técnica)

302
sistema intraurbano, con interconectividad y dependencias en cuanto a roles,
funciones, producción, consumo, comercio, vivienda y lugares de trabajo, entre otros,
todo entrelazado por complejos sistemas de transporte, distribución de agua,
sistemas de electrificación y de alcantarillados, significa un alto grado de
vulnerabilidad
de la estructura, frente a eventos físicos extremos, ya sean extensos o localizados. Por
ejemplo, la destrucción de un solo puente, distribuidora de agua, generadora de
energía eléctrica o carretera intraurbana estratégica, puede tener un impacto difundido
en el sistema urbano en su conjunto, a pesar de lo localizado del daño en el espacio
urbano
en sí. La alta interconectividad de los elementos de la estructura urbana significa una
correa de transmisión de impactos mucho más poderosa que la que existe en entornos
menos densificados y concentrados.
La Ciudad Informal o la Ciudad de Campesinos: Dentro de pocos años las zonas
rurales dejarán de concentrar la mayor proporción de los pobres del mundo, y la
pobreza será un fenómeno eminentemente urbano. La migración forzada a la ciudad,
producto de la expulsión de las zonas rurales y la misma atracción que el medio
urbano ejerce sobre las familias rurales, ya es de larga data en los países pobres. El
tradicional dominio que ejercían las grandes ciudades y metrópolis para los pobres
rurales, ha sido aulatinamente ampliado para incluir ciudades de rango intermedio,
muchas en nuevas zonas de auge económico. No solamente es que las ciudades llegan
a dominar en lo que se refiere a la ubicación de la pobreza en los países pobres, sino
que también las ciudades mismas son dominadas por la población pobre. La
informalidad, la localización y la construcción sin controles dominan cada vez más el
entorno urbano. La población pobre o destituida obligatoriamente se ubica en las
tierras urbanas de menor valor, las cuales inevitablemente son las más inseguras desde
la perspectiva ambiental. El asentamiento en zonas de inundación, pendientes
inseguras, encima de fallas geológicas, en las cercanías de plantas industriales
contaminantes y peligrosas, son ya la norma. Esta
vulnerabilidad localizacional se congela y se institucionaliza cuando el Estado dota de
servicios urbanos a los pobladores que ocupan zonas de amenaza en un proceso de
formalización de lo informal. La vulnerabilidad de la población pobre frente a las
amenazas naturales, socionaturales y tecnológicas significa solamente un riesgo más en
sus vidas cotidianas, dominadas estas por la lucha para la sobrevivencia, la salud, el
empleo, la seguridad etc. La localización insegura se acompaña necesariamente por el
uso de técnicas y materiales de construcción que ni resistirían el embate de las
amenazas de poca magnitud, sin hablar de extremos de la naturaleza. Pero tampoco es
que esta población pobre comprende una masa homogénea en lo que se refiere a la
vulnerabilidad. Como en la mayoría de los contextos de riesgo existentes, ciertos
grupos o sectores revisten mayores características de vulnerabilidad que otros. Las
mujeres solas, jefes de familia, los ancianos y los niños, los enfermos y deshabilitados,
los grupos indigenos y étnicos llevaran el mayor peso en términos de la vulnerabilidad.
Por otra parte, la ciudad es una escena de movimiento continuo. La migración
ruralurbana se complementa con la alta movilidad intraurbana de la población pobre.
Esta migración y movimiento debilita el conocimiento del medio y la adaptación al
entorno natural o ambiental, aumentando aún más la vulnerabilidad existente.

303
La Degradación Ambiental Urbana y la Vulnerabilidad Estructural: La degradación
no solamente se aplica al entorno o al medioambiente natural sino también al ambiente
construido de la ciudad. Las malas prácticas constructivas exhibidas
en las ciudades de los países pobres, obligadas por la misma pobreza de la población,
son complementadas por el proceso continuo de degradación de las mismas
estructuras habitacionales e infraestructurales de la ciudad a lo largo de años de olvido
y falta de renovación. Las infraestructuras de drenaje, de distribución de aguas y
descarga de aguas residuales, los puentes, mercados y edificios públicos, las escuelas y
hospitales, entre otros, sufren en muchos casos años de olvido, sin reparación o
renovación. Se hacen fáciles presas para las amenazas asociadas con sismos, huracanes
o inundaciones. La reducción del tamaño del Estado y la paulatina privatización de la
ciudad y de sus funciones, no garantizan la renovación y un aumento en la seguridad
ciudadana. Los llamados medios de consumo colectivo, tradicionalmente dotados por
el Estado, suelen sufrir más este proceso de degradación y falta de renovación. La crisis
financiera de muchas ciudades solamente acentúa el problema, además de contribuir al
aumento de la inseguridad en el contexto de la violencia social de distinta índole en las
ciudades grandes.
La Vulnerabilidad Política e Institucional: La reducción de la vulnerabilidad en las
ciudades y la promoción de esquemas que garanticen mayor seguridad en el futuro,
requieren de un compromiso político y una institucionalidad consecuentes con tales
objetivos. Esto significa la existencia de políticas, normas e instrumentos de control
legal apropiados. Desdichadamente, en la mayoría de las ciudades y centros urbanos
de la región estas normas y controles no existen, aún cuando están previstas, en
muchos casos, en diversas legislaciones.
La existencia de una multitud de problemas de índole urbana, de características
permanentes y continuas, tiende a distraer la atención de un tratamiento del problema
del riesgo de desastre. Pocas ciudades tienen previstas oficinas u organizaciones
dedicadas al problema del riesgo urbano, y donde existen no se establece una relación
orgánica con aquellas instituciones dedicadas al problema de su planificación sectorial,
social y territorial. Los problemas de la ciudad tienden a tratarse de forma
desmembrada,
ignorando el principio de lo holístico o de los sistemas integrados e interdependientes.
La corrupción, así como la conveniencia de carácter privado de grupos con poder,
tienden a dominar el ámbito de la planificación y control del desarrollo urbano. La
primera de ellas, que es a menudo acompañada por la ceguera institucional o la
negligencia, se encuentra en las formas en que muchos constructores siguen ignorando
las normas de edificación que garantizan un nivel siquiera mínimo de seguridad, frente
a eventos físicos extremos. Lo que la ciudad de México reveló en 1985, con ocasión del
sismo que tumbó inmuebles levantados sin controles, fue repetido en Turquía el año
pasado. Desafortunadamente, esta situación sigue dominando en muchas ciudades
donde las normas existen, pero escasean las manos y la disposición para garantizar su
aplicación. La ciudad informal se acompaña por la ciudad desformalizada. La
conveniencia, por su parte, se expresa entre otras cosas, en lo poco que se hace para
controlar el asentamiento y construcción en zonas de riesgo, acompañado por la ya
comentada institucionalización de éste, a través de la dotación de servicios urbanos a
las colonias marginales y pobres. La alternativa a este modo de resolución puede ser la
creación de bancos o reservas de tierras en zonas de aceptable seguridad, como un

304
esfuerzo para encontrar opciones al asentamiento irregular y desprevenido de la
población más vulnerable. Por último, un corolario de la debilidad o vulnerabilidad
institucional frente a la inseguridad en la ciudad, nos remite a una consideración de las
características sociales o participativas del quehacer de la política y planificación
urbanas. Lamentablemente éste sigue dominado por esquemas centralistas,
tecnocráticos y tecnológicos. Muchas veces las soluciones implementadas para
contrarrestar los problemas urbanos siguen caminos errados, pues han surgido en
exclusiva de la óptica de dichos esquemas, que con frecuencia distan mucho de captar
y entender la realidad. En el caso del riesgo urbano, los enfoques que prevalecen se
fundamentan principalmente en la idea del traslado de pobladores o la construcción de
obras de control de inundaciones o deslizamientos. Estas soluciones no son tales, si se
considera el problema del riesgo desde la perspectiva de los sujetos del riesgo, y no
desde la perspectiva de los formuladores e implementadores de las políticas y la
planificación urbanas. La participación de la población en la decisión política y en la
selección de opciones frente a sus problemas particulares es imprescindible. La
necesidad de disponer de enfoques y soluciones heterogéneos es igualmente
ineludible. La falta de una adecuada política y práctica de participación de la
población, constituye una de las vulnerabilidades más agudas que existen en lo que se
refiere al riesgo en la ciudad. El estímulo a la participación comprende una de las pocas
maneras de poder desarrollar soluciones consecuentes con las necesidades,
posibilidades y anhelos de los habitantes, particularmente de los más pobres.

Algunas observaciones relativas a eventos relacionados al evento


eruptivo del 04 de junio de 2011

Las consecuencias directas en los aspectos físicos de la erupción de Complejo Volcánico


Puyehue Cordón Caulle iniciado el día 04 de junio de 2011, y actualmente en proceso, tienen
múltiples factores, características y efectos. A continuación exploraremos algunas cuestiones
haciendo mención textual a algunos informes emitidos por mí en su momento.

(…)(SIC)
“Barrios Peumayén, Margaritas y Mallín
Vista la experiencia recabada durante las precipitaciones registradas el día 11 de julio, que no
superaron los 23 milímetros (lluvia muy por debajo de los promedios anuales de precipitaciones
tanto de este mes como en el período primaveral), se pone de manifiesto la necesidad de
establecer un grupo especial comprometiendo al sector de Obras y Servicios Públicos (o algún
otro grupo operativo) y la cartera de Desarrollo Social visto el tipo de demanda que se genera y
generará en dichos barrios.

305
Se adjuntan a continuación imágenes que ilustran las situaciones ya detectadas.

Canal de desagüe de Laguna Calafate y alcantarilla sobre calle Cayùn (1)

306
Calle Vargas entre Cayun y Primeros pobladores (2)

Desagüe de canal principal hacia Laguna Calafate desde puente sobre calle
Vargas (3)

307
Canal Principal. Arriba vista desde calle Guananja hacia calle Maestro Pérez
(4)

Abajo vista desde calle Maestro Pérez en dirección a calle Paisil (boca de
tormenta) (5).

El canal se encuentra entubado.

308
Boca de tormenta ingreso de canal
barrio Peumayen hacia canal principal
barrio Mallin en intersección calle
Barbagelata y calle Chumuy. (6)

Vista de calle Vidal (manzana P) y vista desde


la esquina de calles Maestro Pérez y Chumuy
en dirección a calle Primeros Pobladores. Se
aprecian claramente las escorrentías y las
características de los anegamientos. (7 y 8)

309
Vista de calle Vargas desde calle Primeros Pobladores (9)

Barrio Peumayen

Barrio Margaritas

Barrio Mallin

Canal principal

Laguna Calafate

Desagüe laguna

Vista aérea sistema


hídrico Peumayen,
Margaritas, Mallin,
Laguna Calafate

310
6
7

8 5

4
3
2

Vista aérea
sistema
hídrico
Peumayen,
Margaritas,
Mallin,

Es claro que en el sistema hídrico del sector objeto de informe se replica y replicara el
fenómeno en desarrollo del sector bajo del Remanente del Lote Pastoril 11 y barrios El
Cruce y Once (excepto la posible incidencia de flujos de lodo, aludes y/o aluviones).
Este proceso en desarrollo evolutivo, consiste en el transporte del material piro clástico
precipitado por medio del agua (lluvia y nieve al derretirse) en el sentido de las
pendientes. Dicho material se acumula en los sectores bajos elevando el nivel del
terreno preexistente, retardando la velocidad de escurrimiento y disminuyendo la

311
capacidad de transporte del agua. Este fenómeno, inevitable en todo el Ejido, no necesita para su
efectivizacion de procesos catastróficos como aluviones o lahares, sino que su evolución se
desarrolla paralelamente con el de las precipitaciones ordinarias. Dicho fenómeno se agrava aun
mas por los procesos y actividades humanas, públicas y privadas (es decir, de voluntades
individuales).
En los sectores recorridos se detecto gran presencia de material piro clástico acopiado en puntos
de alta sensibilidad con el agravante de que las manzanas ubicadas entre las calles Primeros
Pobladores y Chumuy, a lo largo de los barrios Mallin y Margaritas desde las calle Maestro
Pérez y la calle Paisil tienen una combinación de pendientes en dirección a la Laguna Calafate y
calle Primeros Pobladores (agravado con la característica subida de acceso desde calle Primeros
Pobladores hacia la esquina con calle Paisil que provoca una suerte de represamiento y acelera la
convergencia de sectores de escurrimiento).
El principal agravante de la condición hídrica de los barrios mencionados es la condición
preexistente de los mismos y la falta de mantenimiento de los sectores mas sensibles durante el
verano pasado, desde la infraestructura publica hasta la condición urbana (principalmente la
falta de cloacas, la altura de la napa freática en ascenso, densidad poblacional, densidad y
características técnicas y materiales de las edificaciones) unen la emergencia hídrica con la
emergencia sanitaria que se suceden simultáneamente. Dicha situación no solo pone en riesgo la
salud de los habitantes de los barrios sino que también establece condiciones de riesgo para la
salud del personal que opere en dichos sectores. Por otra parte, dadas las condiciones
socioeconómicas preexistentes y la evolución de la misma a partir de la erupción del sistema
volcánico Puyehue­Cordón Caulle, quizá este sea el sector más sensible y propenso a desarrollar
un estallido social.”

Consideraciones posteriores al modelado realizado de posibles flujos de lodo

“No está demás decir que el modelo matemático realizado por el Dr.
Córdova no sólo ha confirmado nuestros temores y proyecciones de posibles (altamente
probables) flujos de lodo, aluviones, aludes/lahares secundarios sino que su modelado de media
ha superado a nuestras estimaciones de máxima. Claro que, la precisión de toda la información
generada ha quedado sujeta a los escasos datos agregados al simulador, suscrito a las áreas en las
que se seleccionó el foco de ensayo (dejando de lado arroyos de gran cabecera como el de La
Ponderosa, Maderera Misiones y cuenca de Alto Manzano a excepción de Río Bonito), sólo
estando ella sujeta a la mayor precisión o corrección de la simulación obtenida. No obstante, esta
simulación nos ha permitido saber velocidades, energía dinámica (potencia destructiva de la
masa en descenso) y nivel de ola y depósito. En segundo término, interpolando datos e infiriendo
razonamientos, esto nos lleva a pensar en fenómenos similares fuera del Ejido, mayormente
sobre la traza de la Ruta Nacional 231.­
El gran desafío a la fecha, resulta ya en evitar la mayor cantidad de daños
personales posible contando con una mayor certidumbre sobre los alcances posibles del evento.
Dicho desafío se ve opacado en sus resultados por la poca credulidad de parte de la población, en
especial de parte de los viejos pobladores que no cuentan con otra experiencia más que la de 1960
en la cual precipitó una escasa capa de 10­12 cm. de cenizas (según los datos proveídos por
testigos cuyos testimonios en la más de las veces resultan contradictorios como naturalmente
ocurre en estos casos) que en nada se parece a las condiciones actuales. En segundo término, se
ve opacado por una cuestión general de la localidad que podríamos entender y denominar como
“incertidumbre del paisaje”, ello significaría la inexistencia de una comprensión cabal y exacta

312
del proceso experimentado, de la situación general, precedente, actual y futura que promuevan
un nuevo pensamiento. En sí, el discurso general y la búsqueda de respuestas, en términos
generales, no parecen diferir de las ya aplicadas y los criterios de desarrollo tampoco parecen
diferir, de hecho se sigue impulsando urbanizaciones dentro de la misma cuenca cerrada en la
cual la población parece estar condenada a seguir conviviendo dentro de una marisma de aguas
servidas en una constante emergencia social y sanitaria. En sí, a la misma línea de pensamiento
político y acción podemos atribuir la construcción de la barriada que hoy más riesgo corre con
estos eventos posibles, y hasta la infraestructura en riesgo tiene un perfil similar. El hecho de no
demostrar señales de aprendizaje hace la alarma que enciendo con la presente.
El problema del diseño. Villa La Angostura ha cambiado en estos
últimos 15 años como ha cambiado la Nación toda, no obstante, la mutación local experimentado
hace aún más vulnerables a los componentes sociales y a sus subgrupos. El 4 de junio de 2011
presente un quiebre, debería ser el fin de una etapa y el nacimiento de otra. Hoy las dificultades
de esta sociedad han cambiado, pero en la conciencia colectiva y de los principales actores
políticos más experimentados no parece haber variado de esta última década y media. Están más
vinculadas a los fines que a los medios. Las rutinas de antaño, denigradas y resentidas por
tantos mientras aún conservaban plena vigencia, Hoy se han extinguido, llevándose consigo a la
tumba esa confianza inspiradora de seguridad. Ahora ya no se trata de encontrar los medios
para fines definidos y asirlos luego con firmeza y usarlos con la máxima destreza y la mayor
eficacia. Se trata ahora del carácter evasivo (y, con demasiada frecuencia, ilusorio) de los fines,
que se desvanecen y disuelven a más velocidad de lo que cuesta alcanzarlos; indeterminados,
inestables y vistos por lo general como indignos de compromiso y dedicación eternos. Tampoco
cabe confiar en las reglas de admisión a los itinerarios establecidos ni en los permisos para
emprender la marcha sobre ellos. Y esta es una de las cuestiones que hacen aún más compleja la
conducta de la población local y un factor que eleva el potencial de los riesgos naturales en
interacción con ella. Si las reglas no se han desvanecido por completo, tienden a abandonarse y
reemplazarse sin previo aviso. Y, lo que es mas importante, para quien quiera fuere una vez
excluido y destinado al “descarte” no existen sendas evidentes para recuperar la condición de
miembros de pleno derecho. Se enuncia el rescate y proyección ascendente de las personas de los
estratos sociales más bajos pero ello no implica que se trabaje realmente en la evolución necesaria
que eleve sus estándares más profundos y produzca una promoción social­económica y cultural
real. Tampoco existen caminos alternativos, oficialmente aprobados y proyectados, que cupiera
seguir (o que hubiera que seguir a la fuerza) hacia un título de pertenencia alternativo.
La cuestión clave radica en que, mientras que todo esto sucede en la
puerta de nuestra casa (e incluso a nosotros mismos), no podemos decir con franqueza lo que,
usando nuestras herramientas caseras y nuestros recursos de cosecha propia, podemos hacer
para “superar la plaga”. Ya no se trata de un hipo pasajero, de la ralentización que sucede al
recalentamiento de la economía y precede a otro de prosperidad, de un irritante temporal que
“desaparecerá” y “pasará a la historia”. Diríase que las raíces de la dificultad se han desplazado
más allá de nuestro alcance; y sus más densos y espesos macizos no se encontrarán en ninguno
de los mapas del servicio oficial de topografía y cartografía.
Abandonando a su suerte, no iluminado por los focos del escenario y
antes de la primera sesión de montaje con los diseñadores, el mundo no es ni ordenado ni
caótico, ni limpio ni sucio. El diseño humano es lo que hace aparecer el desorden junto con la
visión del orden, la suciedad junto con el proyecto de pureza. El pensamiento recorta primero la
imagen del mundo, de suerte que puede recortarse al propio mundo a continuación. Una vez
recortada la imagen, el recorte del mundo (el deseo de recortarlo, el esfuerzo por recortarlo, si

313
bien no necesariamente la consumación de la hazaña del recorte) es una conclusión inevitable.
El mundo es manejable y demanda ser manejando en tanto en cuanto se ha rehecho a la medida
de la comprensión humana. El mandato de Francis Bacon, en virtud del cual “para ser
gobernada, la naturaleza ha de ser obedecida”, no era una llamada a la humildad y menos aún
una invitación a la mansedumbre. Era un acto de desafío.
Villa La Angostura, la región en si misma desde que se creó la Colonia
Nahuel Huapi, ha estado en un claro acto de desafío. La ocupación y uso de la tierra se ha
caracterizado por la actividad prospectiva y últimamente por el fraccionamiento cada vez más
reducido y la venta del mismo. Directamente, se vende la tierra sin elaboración, en bruto,
alterada, esquilmada.
La naturaleza ha sido obedecida ­sea como fuere, a sabiendas o no­ desde
el principio de los tiempos. Al fin y a la postre, el significado mismo de la idea de “naturaleza”
había que buscarlo en el hecho de no ser obra humana y extenderse, por consiguiente, más allá
del alcance humano y eludir el poder humano. La herejía de Bacon consiste en la idea de que la
naturaleza así concebida no necesita y no debería dejarse tal como está, había sucedido hasta
entonces debido a una lamentable negligencia y a una excusable falta de resolución, sino que
puede gobernarse, siempre y cuando aprendamos sus leyes, que hemos de obedecer. Tres siglos
más tarde, Kart Marx habría de reprender a los filósofos por no acertar a seguir hasta el final el
precepto baiconiano. Diría Marx que con toda la perfección de un panal, hasta el más desastroso
y torpe de los arquitectos es superior a una abeja, y ello gracias a la imagen del producto acabado
que tiene en su cabeza antes de que comience el trabajo de construcción.
Por supuesto, los diseños se requieren porque está a punto de crearse algo
nuevo; se va a cambiar algo existente, ya presente ahí afuera, en el mundo tal cual es. Y así como
no se sabe si algo es bueno hasta que se prueba, el conocimiento se aprueba a sí mismo
cambiando el mundo. Hay, con todo, dos maneras radicalmente diferentes de crear lo nuevo.
Para ello podemos usar una alegoría, la de la agricultura y la minería. La agricultura en su
mismo ejercicio repone lo que el hombre extrae de ella. La minería es, por su parte, el arquetipo
de la ruptura y discontinuidad. Lo nuevo no puede nacer a menos que se deseche, se tire o se
destruya algo. Lo nuevo se crea al hilo de la disociación meticulosa entre el producto final y todo
cuanto se interpone en el camino que conduce a el. Cuando le preguntaban cómo lograba la
armonía y belleza en sus esculturas a Miguel Angel, siempre respondía “es sencillo, se toma un
bloque de mármol y se eliminan todos los pedazos superfluos”. En el apogeo del renacimiento,
Miguel Angel pregonaba el concepto que habría de guiar la creación moderna. La separación y la
destrucción de los residuos habría de ser el secreto de la creación moderna: eliminando y tirando
lo superfluo, estibándolo allí donde no se ve ni molesta.
La mentalidad moderna nació junto con la idea de que el mundo puede
cambiarse. La modernidad consiste en el rechazo del mundo tal como ha sido hasta el momento y
en la resolución de cambiarlo. La forma de ser moderna estriba en el cambio compulsivo y
obsesivo: en la refutación de lo que es meramente en el nombre de lo que podría y, por lo mismo,
debería ocupar su lugar. El mundo moderno es un mundo que alberga un deseo y una
determinación. La historia moderna ha sido, por consiguiente, una historia de diseño y un
cementerio de diseños probados, agotados, rechazados y abandonados en la guerra en curso de
conquista y/o desgaste librada con la naturaleza.
Tal y como nos enseñan las cinco extinciones planetarias que nos
anteceden, la naturaleza se autorregula, ella siempre gana. Para Villa La Angostura, ante la
nueva realidad y las comprobaciones científicas presentes, la imposible aplicación de alertas
tempranas más que para los cauces que forman parte de la cuenca del Río Bonito, otras

314
respuestas sensatas más que la evacuación de ciertos sectores, la reubicación y la conciencia del
riesgo no hay. Primeramente la urgencia, posteriormente el reordenamiento territorial.
Si bien un diseño a toda prueba, a prueba de riesgo, es prácticamente una
contradicción en sus término. Quizá sólo podamos ajustarnos a cargar al ambiente sólo con la
carga que puede sostener. Para que se vea “realista” el diseño necesita simplificar la complejidad
del mundo. Debe diferenciar lo “relevante”, filtrar los elementos manejables de la realidad
separándolos de esas partes resistentes a la manipulación, y centrarse en los objetivos que se
tornan “razonables” y “dentro de nuestras posibilidades”, merced a medios y habilidades
actualmente disponibles.

*Confluencia de los arroyo El Colorado y Florencia Norte, corazón de la zona 2 de aludes/lahares más destructiva
probable. El goce de su alto valor estética claramente no queda privado de riesgo. El ambiente natural es elevadamente
riesgoso, gozarlo implica maximizar los cuidados, como expresara Nikos Kazantiakis, “las puertas de cielo e infierno
son adyacentes e idénticas”.

En la vida humana no abundan los momentos “primitivos”, es decir: el


hombre solo y desnudo ante la implacabilidad de los medios naturales y la dinámica del planeta
que le es propia. Utilizamos gran parte de nuestra energía, nuestro ingenio y nuestro ingenio
acumulado para tratar de evitarlos. Sin embargo, de vez en cuando la Tierra nos recuerda que la
seguridad no es más que una ilusión, porque las cosas que hacen posible la vida (una atmósfera
dinámica, el movimiento de la corteza adyacente, el milagro del fuego, la impaciente roca líquida
de las profundidades) también pueden alterar y destruir la vida, y es en esos momentos
primitivos cuando los seres humanos, aterrorizados y sobrecogidos ante el poder de la Tierra,
encuentran que sus vidas han sido devueltas a la condición primigenia.
Al igual que la muerte, el desastre nos repele y nos fascina. A últimas
fechas, muchos hemos tenido ocasión de averiguarlo. Hay mucho que aprender de lo sucedido, de
lo que está por suceder y aquello que algún día sucederá. Los desastres cuando no privan de la
vida la alteran durante largos años, y nos muestran sin rodeos quienes somos y que somos
realmente. Después de una catástrofe, una de las primeras cosas que se preguntan las víctimas

315
es por qué. Y la ciencia siempre tiene una explicación. A veces, las víctimas quieren
responsabilizar a alguien de lo ocurrido. En el sector más sensible de la zona de aludes, la
cabecera del B° Las Piedritas, existe un barrio institucional, es decir construido por el Estado,
ubicado en el punto de más alto riesgo que hay que evacuar. Para quien vive allí, el Estado lo
ubicó en ese lugar, es decir, el Estado lo puso en riesgo. Más que nunca prima el concepto de que
quien origina el riesgo tiene la responsabilidad legal y ética de mitigarlo.
Aunque la primera etapa de la respuesta ante un desastre pone de relieve
aspectos muy positivos de la humanidad, la otra cara es muy desagradable y destructiva.
Después de un desastre, la primera parte de la recuperación humana concluye cuando el
desorden da paso a una rutina superficial basada en el nuevo y brutal panorama, etapa que
requiere de cualidades por completo diferentes. La recuperación es un concepto simple, el
desastre cambia la geografía de la vida. ¿Cómo poner las cosas en su sitio otra vez? Es imposible;
hay que construir algo distinto. Los sistemas que ayudan a la reconstrucción varían de manera
significativa. También varían significativamente las esperanzas de los afectados. Una de las
grandes esperanzas que abrigan muchos de los afectados es que pueden aplicar la lección
aprendida, a fin de que el desastre no sea igual de violento la próxima vez. Aquí en Villa La
Angostura es sumamente variable, máxime si examinamos el historial de actividades volcánicas
tenemos eventos intensos en 1921, 1922 (al año siguiente), en 1937 (muy leve), en 1954, 1960,
1979 (muy leve), 1991 (muy leve, no mas de unos pocos e inadvertidos milímetros de ceniza en
una noche) y 2011 (entre 50 y 40 cm. de tefra en las primeras 24 horas de la erupción en el
sector de El Rincón y Paso Zamoré y 30 cm. de tefra en el sector de Ejido Municipal, nada
nuevo ni extraño por cierto). Los profesionales en desastres llaman a esto mitigación, y
representa el aspecto práctico de la esperanza. La mitigación incluye diversas tácticas como
anclar mejor edificios, mejorar la integridad estructural de caminos, puentes, tendidos eléctricos
y otras obras públicas, utilizar nuevas técnicas y criterios de construcción, y desarrollar
reglamentos de zonificación que reflejen un mayor conocimiento de los peligros naturales: por
ejemplo, edificar nuevas casas apartadas de las zonas de aluvión.
Estas medidas parecen lógicas, pero esa esperanza de saber más la
próxima vez también puede complicar la recuperación pues, aunque se quiera hacer en esta
nueva oportunidad las cosas bien o mejor, el auge y ansia política de construcción posterior a un
desastre, muchas veces escapa a las garantías de que realmente se utilizan los nuevos
conocimientos asimilados y la obediencia de los nuevos códigos.
Cuando se ha vivido un desastre, nada parece más importante que el
desesperado contacto con el poder de la Tierra; sin embargo, una vez que el cataclismo se
desvanece en el recuerdo nos preocupamos menos por prepararnos para el siguiente. ¿Alguna
vez nos dejaremos seducir por estos preparativos? ¿Las alertas? La decisión de obedecer estas
alarmas depende, en última instancia, de la naturaleza humana. En muchos casos los
preparativos han salvado vidas, y siempre ayuda la conciencia de la realidad del entorno. De
hecho, los preparativos permiten que gran número de personas en todo el mundo puedan
superar importantes peligros casi de manera rutinaria. Es indiscutible que el enorme costo que
se paga por la recuperación de un desastre demuestra la necesidad de mejorar la mitigación y la
preparación. Después de todo, el esfuerzo que se hace por crear un mapa de riesgos naturales
para Villa La Angostura es enseñarnos a sobrellevarlos, y debemos estar dispuestos a reconocer
la inseguridad de la vida, a fin de estar más seguros.
La preparación siempre choca con nuestras emociones. Después que
desaparece un desastre, la humanidad tiende a evitar los recuerdos y las lecciones aprendidas.
No queremos mirar lo que no queremos ver. Sin embargo, lo más importante que revela un

316
desastre sobre nosotros mismos es que podremos encararlo cuando ocurra, a veces con pánico,
otras con valor, en ocasiones de maneras muy desagradables y también con un majestuoso
donaire propio de un caballero andante dado a las grandes hazañas.”

(Viviendas en estado de alto riesgo flujos de


Cabecera norte de Bª Las Piedritas

lodo)

De acuerdo con nuestra definición, tendríamos que las condiciones


de riesgo son parte de un proceso acumulativo y de interacción entre factores de
carácter natural y social. Y efectivamente, siendo coherentes con la idea que expresa
que los desastres sólo son desastres cuando fenómenos de diverso origen impactan
sobre poblaciones vulnerables, podríamos decir, entonces, que el riesgo surge como tal
con la aparición misma del hombre y al momento en que éste comienza a interactuar
con la naturaleza.
No obstante, tomar como absoluta esta afirmación para explicar
los componentes del riesgo y la ocurrencia de desastres sería tan simplista y
determinista como decir que los desastres son naturales y que el riesgo sólo
desaparecería con la extinción de la raza humana.
La evidencia histórica muestra que el riesgo, al igual que la
sociedad y la propia naturaleza, ha evolucionado, se ha complejizado y ha tenido
diversas formas de expresión. Por tanto, el problema en cuestión es mucho más

317
complejo y descubrir su esencia implica entender cómo se da la interacción hombre­
naturaleza, cuál es la mediación en dicha interacción y cómo han evolucionado los
procesos sociales.
La vulnerabilidad de los pueblos se da:
1) Cuando la gente ha ido poblando terrenos que no son buenos
para vivienda, por el tipo de suelo, por su ubicación inconveniente con respecto a
aludes, avalanchas, deslizamientos, inundaciones, etc.
2) Cuando ha construido casas muy precarias, sin buenas bases o
cimientos, de material inapropiado para la zona, que no tienen la resistencia adecuada,
etc.
3) Cuando no existe condiciones económicas que permitan
satisfacer las necesidades humanas (dentro de las cuales debe contemplarse la creación
de un hábitat adecuado). Esta falta de condiciones socioeconómicas puede
desagregarse en desempleo o subempleo y, por tanto, de falta de ingreso o ingreso
insuficiente, escasez de bienes, analfabetismo y bajo nivel de educación, formas de
producción atrasadas, escasos recursos naturales, segregación social, concentración de
la propiedad, etc.
Todos estos son elementos causantes de la vulnerabilidad física
que presentan algunos pueblos. Si los hombres no crean un "hábitat" seguro para vivir
es por dos razones: la necesidad extrema y la ignorancia. Ambas razones a su vez
tienen causas detectables y modificables, algunas de las cuales forman parte de la
misma estructura social y económica de un país.
De otro lado, las precarias condiciones económicas son por sí
mismas también condiciones de vulnerabilidad, ya que la magnitud de daño real es
mayor si la población carece de los recursos a partir de los cuales pueda recuperarse
(recursos económicos: ahorros, seguro, propiedad de tierras, etc.; recursos naturales:
formación, criterios técnicos, elementos básicos de seguridad, conocimientos sobre las
funciones de cada organismo de ayuda, etc.; recursos sociales: organización,
experiencia de trabajo conjunto, participación comunal, etc.)
Las condiciones de vulnerabilidad que una población presenta no
son condiciones que se hayan dado independientemente del hombre. Muy por el
contrario, es el mismo hombre quien las ha creado, y al hacerlo se pone de espaldas a la
naturaleza, corriendo el riesgo de resultar dañado si ocurriese un fenómeno natural
determinado.
Las condiciones de vulnerabilidad se van gestando y pueden ir
acumulándose progresivamente configurando una situación de riesgo (que muchas
veces se inadvierte, se trata de minimizar o se menosprecia temerariamente). Así, por
ejemplo, una vivienda cuando es nueva puede ser segura y resistente para el medio en
que uno vive, pero con el tiempo, debido al uso y la falta de mantenimiento, podría
deteriorarse y debilitarse hasta un límite en que resulta un potencial sepulcro para sus
ocupantes.
En conclusión: hay condiciones de vulnerabilidad física detrás de
las cuales hay causas socioeconómicas. Hay pueblos que han sido construidos desde su
origen sin ningún o con muy poco criterio de seguridad y puede llamárseles
vulnerables por origen, y adicionalmente hay pueblos enteros, casas, canales de riego,
reservorios, puentes, etc. que con el tiempo van envejeciendo y debilitándose, debido a
los factores señalados, a lo cual denominamos vulnerabilidad progresiva.

318
Para el caso, las tomas de agua existentes sobre los cauces de los
arroyos Las Piedritas y El Colorado, con toda seguridad, una vez ocurrido el evento
esperado se perderán o dañarán gravemente y una gran porción de la ciudadanía se
verá privada de abastecimiento de agua corriente.
Dado el modelado matemático realizado con una pequeña fracción
de la cuenca hídrica local y teniendo en cuenta sólo una porción de la población en
riesgo, si bien la mayor proporción, es de tener en cuenta los eventos que se pudieren
producir sobre los cauces ya enunciados.

Resumiendo la comunicación del riesgo

Contexto ambiental:
ambienta l: Regió n de volcanes
volca nes

VR

Contexto volcá
volcánico histó
histórico
•El Cordón Caulle regis tra actividad hace 430.000 años.
•Durante los últimos 6000 años (era post glaciaria) se ha caracterizado por producir eventos de caída de
tefra en la zona de Bariloche y Villa La Angostura.
•En base a esto y a la composición de las muestras podemos afirmar que el 90% del material volcánico
presente en la región proviene del Cordón Caulle.
Eventos eruptivos registrados:
1. 1586 (entre esta fecha
Fallay 1759 la región fue desocupada por los españoles y no hay registros escritos)
Liquiñe-Ofqui
2. 1759
3. 1863
4. 1893
5. 1905
Fuente: Sm ithson ian /USGS U SA

6. 1914
7. 1919
8. 1921-1922
9. 1929
27 Km.
10. 1934
C de emisión activos
11. 1954-1955 (Sistema Riñilahue-Carrán-Lago Los Venados)
12. Calderas antiguas
1960 (10 calderas entraron en actividad)
13. 1979
14. 1990
15. 1991 •Promedio: 1 evento eruptivo cada 18 años
(Fuente: Smithsoni an-USGS-Un iv er sidad d e Chi le)
16. 2011

319
Descripción del fenómeno

Nivel de Alerta

Nivel 6 - Rojo Erupción moderada


Nivel 5 - Rojo Erupción moderada
Nivel 5 – Rojo Erupción moderada

Tefra acumulada hasta el 20 de julio

320
Detalle

Ejes de elaboración y ejecución

_ A) Diagnóstico de riesgo
_ B) Organización y gestión de tareas paliativas
para reducción de efectos
_ C) Relevamiento de viviendas y de habitantes en
riesgo
_ D) Diagramación y ejecución de estrategias
preventivas

321
A) Diagnóstico de riesgo

� Monitoreos, observaciones de campo, muestreos

� Coordinación de la actividad científica

� Selección y modelado cartográfico de los estudios

� Elaboración de un diagnóstico presuntivo con


fines operativos

� Descripción de áreas de alto, medio y bajo


impacto

Trabajos científicos locales


En la primera semana del evento surgieron los primeros interrogantes sobre los
posibles efectos secundarios del volcán. En base a la información recolectada y
obrante en la Oficina de inspecciones, la Dirección de Medio Ambiente y la Oficina
de Catastro del Municipio, a los datos recolectados por agentes municipales en
forma extralaboral, a la participación del SIG del ejercito, a estudios científico
técnicos existentes en la localidad y al modelado realizado desde el C.O.E. en el
marco de la emergencia se elaboró este primer diagnóstico presunti vo Mapa de
Riesgo Preliminar de la localidad.

322
Estudios cientí
científicos nacionales e
internacionales
Se sucedieron nuevos estudios realizados por las siguientes instituciones:

. Comisión de geólogos de SEGEMAR


• Cedric Larcher Análisis de probabilidad de avalanchas sobre Centro
de Esquí Cerro Bayo
• Equipo UNEP de ONU Estudio y diagnóstico
• Equipo científico de CONICET (Gustavo Villarosa, Valeria Ute)
• Cedric Larcher Segundo informe de estabilidad del manto de nieve
• Dres. Córdova y Villarosa (Colombia) Análisis y Modelado
matemático implementación del Programa TITAN2 BETA

Del modelado mate mático realizado en su faz preliminar�hvpor el equipo de


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los Dres. Córdova y Villarosa: �t �x �y


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•Se establecieron patrones de áreas sensibles, movimientos posibles, transporte, velocidad, energía,
tiempo y espesor de descarga.-
•Se establecieron áreas de riesgo máximo posible/probable.-
•Se identificó área y población en riesgo.-

323
EFECTOS SOBRE ZONAS DE RIESGO
1. Hipótesis de desprendimiento de baja intensidad:
• Descargas posibles de material con espesores entre 10 cm. y 1,80 mt.

Fuerza de impacto:
• Energías dinámicas entre los 20 y 41 KPa sector descarga El Colorado-Florencia
(ver otras similitudes).-
• Energías dinámicas entre los 46 y 83 Kpa sector descarga Zanjón La Ponderosa
(ver otras similitudes).-

Velocidad: (según modelo mate mático)


• En la zona El Colorado Florencia se estima una velocidad entre 72 y 86 km/h.-

Tiempo estimado de transito entre cabecera y área poblada:


• Se estima (según modelo mat emático) entre 8 y 3 minutos.-

Para los casos de las zonas de impacto directo y secundario en las hipótesis de baja y media-
alta intensidad existen alta probabilidad de riesgo de pérdida de vida para el personal que se
encuentre en áreas descubiertas y expuestos al impacto.-

EFECTOS SOBRE ZONAS DE RIESGO


2. Hipótesis de desprendimiento de mediana intensidad:
• Descargas de mat erial con espesores ent re 0.50 mt. y 2,40 mt.

Fuerza de impacto:
• Energías dinámicas entre los 40 y 85 KPa sector descarga El Colorado-Florencia
(ver otras similitudes).-
• Energías dinámicas entre los 50 y 124 Kpa sector descarga Zanjón La Ponderosa
(ver otras similitudes).-

Velocidad: (según modelo matemático)


• En la zona El Colorado Florencia se estima una velocidad entre 72 y 86 km/h.-

Tiempo estimado de transito entre cabecera y área poblada:


• Se estima (según modelo mat emático) entre 8 y 3 minutos.-

Para los casos de las zonas de impacto directo y secundario en las hipótesis de baja y media-
alta intensidad existen alta probabilidad de riesgo de pérdida de vida para el personal que se
encuentre en áreas descubiertas y expuestos al impacto.-

324
EFECTOS SOBRE ZONAS DE RIESGO
2. Hipótesis de desprendimiento de alta intensidad:
• Descargas de mat erial con espesores ent re 1.00 mt. y 3,60 mt.

Fuerza de impacto:
• Energías dinámicas entre los 40 y 85 KPa sector descarga El Colorado-Florencia
(ver otras similitudes).-
• Energías dinámicas entre los 50 y 124 Kpa sector descarga Zanjón La Ponderosa
(ver otras similitudes).-

Velocidad: (según modelo mate mático)


• En la zona El Colorado Florencia se estima una velocidad entre 72 y 86 km/h.-

Tiempo estimado de transito entre cabecera y área poblada:


• Se estima (según modelo mat emático) entre 8 y 3 minutos.-

Para los casos de las zonas de impacto directo y secundario en las hipótesis de baja y media-
alta intensidad existen alta probabilidad de riesgo de pérdida de vida para el personal que se
encuentre en áreas descubiertas y expuestos al impacto.-

Efectos de la fuerza de impacto:

Energía Kpa Hasta un 90% de daños a


0,4 Ro tura de vidrios

0,6 colapso de puertas

1-1,2 30 % de árboles caído s/equivale a ser atropellado por un a utomóvil med iano

2-2,4 90 % de árboles de rribados

3 ventanas, revestimientos de madera y chapa co rruga da, estructuras de madera sin refo rza r

4 colapso de estructuras metálica s medianas y estructuras de made ra

6,9-13,8 colapsa n viviendas de mamposte ría sin estructura reforzada

9 colapsa n muros de mamposte ría só lidos/refo rzados

13 rompe pa rede s de mamposte ría refo rzadas

15 colapsa n muros y estructuras de horm igó n

21-69 colapso to tal de la vivienda incluidas las divisiones internas

Según estudio de G.Valentine Damage to structures by pyroclastic flow s and surges, inferred
from nuclear w eapons effects, 1988.-

325
FACTORES DESENCADENANTES

1. Condiciones primaverales:
• Período de deshielo con altas temperaturas.-
• Lluvias intensa s 100 mm con condicione s de temperatura templada.20 º-
• Colapso por propio pe so.-
• Pendientes.-

2. Una vez ocurrido el deshielo y una vez que el material esté suelto:
• Colapso de laderas.-
• Lluvias de mediana 100 mm a alta intensidad.-
• Flujos secos que obstruyan cauces y paleocauces.-

3. En toda condición:
• Sismos de baja, mediana o alta intensidad que desprendan y movilicen el
material.-

B) Organizació
Organización y gestió
gestión de tareas
paliativas para disminución de efectos

ACCIONES REALIZADAS POR EL C.O.E. (inicialmente)


DEFENSA CIVIL y Unidad ejecutora.
En funció
función de las hipó
hipótesis de riesgo

, Exploración e Identificación de áreas de riesgo

. Confección del Mapa de Riesgo Preliminar conjuntamente con


Ejército Argentino.-

. Coordinación, cooperación y acompañamiento a los científicos


en sus respectivos estudios-

326
. Relevamiento y Monitoreo constante de las áreas sensibles o de
interés particular-

. A través de Ejercito Argentino limpieza y despeje de cauces.-

. A través de Unidad Ejecutora limpieza, despeje y definición de cauces


y áreas de depósito de flujos según modelado matemático.-

. Mapeo actual de áreas susceptibles de riesgo.-

C) RELEVAMIENTO DE VIVIENDAS Y
HABITANTES EN RIESGO
__ Cuantificado del número de personas a evacuar
__ Determinar condiciones de mayor o menor vulnerabilidad
__ Pedido de asistencia del Estado para reubicaciónen en áreas fuera de riesgo
directo

__ Referencias de zonificación:
__ Sector edificado en riesgo máximo zona de impacto (a evacuar)
__ Sector edificado riesgo secundario
(impacto indirecto recomendar evacuar y/o tomar previsiones)
__Sector con riesgo de inundación (recomendar tomar previsiones)
*Las zonificaciones están demarcadas a los fines operativos, no resultan determinantes ya que las mismas se basan
en un modelado matemático presuntivo realizado por el Dr. Gustavo Córdova utilizando el programa Titan2Beta. Es
posible que la magnitud del evento supere el modelado o que el flujo final vea alterada su direccionalidad por
dinámica propia. Al respecto se ha dispuesto una demarcación más amplia.-

327
P arque Indus tria l

A° F lore ncia N orte

C as cada A ° L as

Madesur

328
Bº Las Piedritas

Descripción de áreas
(alto, medio y bajo impacto)
Sector Madesur y Vado Piedritas.-
•Sector Pañol-Talleres de Obras y Serv. Públicos y toma de agua sobre Aº El Colorado.-
•Sector planta de Epen y Campamento CONEVIAL-CODI.-
•Sector Norte línea 1º Mz de Bº Las Piedritas (impacto directo).-
•Sector Norte línea 2º Mz. Bº Las Piedritas (impacto secundario).-
•Sector Central y Sur Bº Las Piedritas (riesgo de inundación).-
•Sector Oeste Bº El Cruce y Once (riesgo de inundación).-
•Sector Corralitos (riesgo de inundación).-
•Zanjón La Ponderosa alto (Camino del Conde Chautobriand).-
•Zanjón La Ponderosa medio y ph Caren Hué (derecha e izquierda) por camino acceso Aº Del Muerto
a Faldeo del Bayo.-
•Aº Del Muerto arriba Ruta Nac. Nº 231 y sector Sasha.-
•Sector Chacras de Pto. Manzano Cauce Río Bonito laterales este y oeste bajos al Sur Ruta Nac.
231.-
•Sector Chacras de Puerto Manzano y Alto Manzano cercanía a cauces Aº S/N toma de agua, Aº S/N
ph Ducau y Aº Zanjón Marinas, Bahía Montaña, El Cortijo, Genciana y Basurero Municipal.-

329
D) Diagrama y ejecució
ejecución de Estrategias
preventivas.

Concientización de riesgos

. Ampliación de estudios científico técnicos sobre riesgos ambientales.

• Expresión cartográfica para impulsas una nueva planificación territorial que contemple las
componentes de riesgo enunciadas

• Divulgar información a las autoridades (ejecutivas y legislativas) y


coordinar acciones en forma conjunta

. Divulgar información a autoridades intermedias y coordinar acciones

. Divulgar información a la población y coordinar acciones en forma


conjunta

. Utilización de medios gráficos, radiales, televisivos, reuniones


informativas y casa por casa

•A futuro próximo impulsar el reordenamiento territorial.

Planes de evacuación

. Elaborar esquemas de notificación y de evacuación de posibles


afectados. Ej: Plan de evacuación sector de cabecera de Bº Las
Piedritas

. Elaboración de Simulacro de evacuación de población zona


urbana

Protocolo estratégico de Prevención

. Desarrollo de esquema de alertas

. Desarrollo de Protocolo de Rescate de afectados de Lahares-


Aludes en Zona Urbana

. Apoyo a Ministerio de Salud de la Provincia del Neuquén de


simulacro de rescate de afectados lahares/aludes.-

El gran desafío a la fecha, resulta ya en evitar el mayor daño posible a la


población contando con una mayor certidumbre sobre los alcances posibles del/los

330
evento/s. Dicho desafío se ve opacado en sus resultados por la poca credulidad de parte de
la población, en especial de parte de los viejos pobladores que no cuentan con otra
experiencia más que la de 1960 en la cual precipitó una escasa capa de 10 cm. de cenizas
que en nada se parece a las condiciones actuales. Es decir, la experiencia viva local resulta
insuficiente para explicar el evento que vivimos, predecir los eventos secundarios
siguientes y proveer un recetario de acciones a realizar ante el riesgo.
El pensamiento recorta primero la imagen del mundo, de suerte que puede
recortarse al propio mundo a continuación. Una vez recortada la imagen, el recorte del
mundo (el deseo de recortarlo, el esfuerzo por recortarlo, si bien no necesariamente la
consumación de la hazaña del recorte) es una conclusión inevitable. El mundo es manejable
y demanda ser manejado en tanto y en cuanto se ha rehecho a la medida de la comprensión
humana. Tal y como nos enseñan las cinco extinciones planetarias que nos anteceden, la
naturaleza se autorregula, ella siempre gana. Para Villa La Angostura, ante la nueva
realidad y las comprobaciones científicas presentes, la imposible aplicación de alertas
tempranas más que para los cauces que forman parte de la cuenca del Río Bonito, otras
respuestas sensatas más que la evacuación de ciertos sectores, la reubicación y la conciencia
del riesgo no hay. Primeramente la urgencia, posteriormente el reordenamiento territorial.
Si bien un diseño a toda prueba, a prueba de riesgo, es prácticamente una contradicción en
sus términos. Quizá sólo podamos ajustarnos a cargar al ambiente sólo con la carga que
puede sostener. Para que se vea realista el diseño necesita simplificar la complejidad del
mundo. Debe diferenciar lo relevante, filtrar los elementos manejables de la realidad
separándolos de esas partes resistentes a la manipulación, y centrarse en los objetivos que
se tornan razonables y dentro de nuestras posibilidades, merced a medios y habilidades
actualmente disponibles.
1. En la vida humana no abundan los momentos primitivos, es decir: el hombre solo y
desnudo ante la implacabilidad de los medios naturales y la dinámica del planeta que le es
propia. Utilizamos gran parte de nuestra energía, nuestro ingenio y nuestro ingenio
acumulado para tratar de evitarlos. Sin embargo, de vez en cuando la Tierra nos recuerda
que la seguridad no es más que una ilusión, porque las cosas que hacen posible la vida
(una atmósfera dinámica, el movimiento de la corteza adyacente, el milagro del fuego, la
impaciente roca líquida de las profundidades) también pueden alterar y destruir la vida, y
es en esos momentos primitivos cuando los seres humanos, aterrorizados y sobrecogidos
ante el poder de la Tierra, encuentran que sus vidas han sido devueltas a la condición
primigenia. Al igual que la muerte, el desastre nos repele y nos fascina. A últimas fechas,
muchos hemos tenido ocasión de averiguarlo. Hay mucho que aprender de lo sucedido, de
lo que está por suceder y aquello que algún día sucederá. Los desastres cuando no privan
de la vida la alteran durante largos años, y nos muestran sin rodeos quienes somos y que
somos realmente. Después de una catástrofe, una de las primeras cosas que se preguntan
las víctimas es por qué. La ciencia siempre tiene una explicación, y a veces, las víctimas
quieren responsabilizar a alguien de lo ocurrido. No obstante, hoy más que nunca prima el
concepto de que quien origina el riesgo tiene la responsabilidad legal y ética de mitigarlo.
Aunque la primera etapa de la respuesta ante un desastre pone de relieve aspectos muy
positivos de la humanidad, la otra cara es muy desagradable y destructiva. Después de un
desastre, la primera parte de la recuperación humana concluye cuando el desorden da paso
a una rutina superficial basada en el nuevo y brutal panorama, etapa que requiere de
cualidades por completo diferentes. La recuperación es un concepto simple, el desastre
cambia la geografía de la vida. ¿Cómo poner las cosas en su sitio otra vez? Es imposible;
hay que construir algo distinto. Los sistemas que ayudan a la reconstrucción varían de
manera significativa. También varían significativamente las esperanzas de los afectados.

331
Una de las grandes esperanzas que abrigan muchos de los afectados es que pueden aplicar
la lección aprendida, a fin de que el desastre no sea igual de violento la próxima vez. Aquí
en Villa La Angostura es sumamente variable, máxime si examinamos el historial de
actividades volcánicas tenemos eventos intensos, leves y muy leves. Examinando la
actividad volcánica de nuestro sector, que comprende 22 volcanes (y/o sistemas volcánicos,
uno de ellos por ejemplo comprende 48 centros de emisión) activos podemos encontrar
erupciones en 1586 (entre esta fecha y 1759 la región fue desocupada por los españoles y no
hay registros escritos), 1759, 1863,1893,1905, 1914, 1919,1921­1922,1929,1934,1954­1955
(Sistema Riñilahue­Carrán­Lago Los Venados),1960 (10 calderas entraron en
actividad),1979,1990,1991 y 2011 (en que entre 50 y 40 cm. de tefra en las primeras 24 horas
de la erupción en el sector de El Rincón y Paso Zamoré y 30 a 36 cm. de tefra en el sector de
Ejido Municipal, nada nuevo ni extraño por cierto). Los profesionales en desastres llaman a
esto mitigación, y representa el aspecto práctico de la esperanza. La mitigación incluye
diversas tácticas como anclar mejor edificios, mejorar la integridad estructural de caminos,
puentes, tendidos eléctricos y otras obras públicas, utilizar nuevas técnicas y criterios de
construcción, y desarrollar reglamentos de zonificación que reflejen un mayor
conocimiento de los peligros naturales: por ejemplo, edificar nuevas casas apartadas de las
zonas de aluvión. En este caso retirar la tefra depositada se debe denominar rehabilitación
y la remediación implica una larga suma de estrategias y acciones.
Cuando se ha vivido un desastre, nada parece más importante que el
desesperado contacto con el poder de la Tierra; sin embargo, una vez que el cataclismo se
desvanece en el recuerdo nos preocupamos menos por prepararnos para el siguiente.
¿Alguna vez nos dejaremos seducir por estos preparativos? ¿Las alertas? La decisión de
obedecer estas alarmas depende, en última instancia, de la naturaleza humana. En muchos
casos los preparativos han salvado vidas, y siempre ayuda la conciencia de la realidad del
entorno. De hecho, los preparativos permiten que gran número de personas en todo el
mundo puedan superar importantes peligros casi de manera rutinaria.
La preparación siempre choca con nuestras emociones. Después que desaparece
un desastre, la humanidad tiende a evitar los recuerdos y las lecciones aprendidas. No
queremos mirar lo que no queremos ver. Sin embargo, lo más importante que revela un
desastre sobre nosotros mismos es que podremos encararlo cuando ocurra, a veces con
pánico, otras con valor, en ocasiones de maneras muy desagradables y también con un
majestuoso donaire propio de un caballero andante dado a las grandes hazañas.
Esto no es mas que el proceso de crecimiento de la Cordillera de los Andes y su
geografía cambia irreversiblemente con continuos movimientos invisibles y casi
imperceptibles y/o con eventos espectaculares como el vivido en estos momentos. Aquí
encontramos restos de bosques sumergidos, bosques sepultados por lodo y tefra, árboles
arraigados sobre arenas volcánicas, únicos elementos que fijan el suelo en las laderas,
árboles no mayores a 150 años (un pestañeo geológicamente hablando) sobre las zonas hoy
designadas áreas rojas de riesgo de alud . Villa La Angostura en su sector central más
densamente poblado y con más altos índices urbanísticos se encuentra en un llano
aluvional surcado por decenas de cauces superficiales y subterráneos que recorren el
trayecto entre las montañas y el lago. Situados a 40 kilómetros de una de las fallas más
activas del planeta, no hacemos más que proyectar sobre terreno de una dinámica
implacable. Parece que los fuegos que hierven bajo la región han afectado a los pobladores
y perfilado las montañas durante toda la historia y, cuando parece poco probable que
peores situaciones acontezcan en el transcurso de la vida de los habitantes de alrededor de
40 años de edad, no hay duda de que, a la corta o a la larga, llegarán. Es un agradable lugar
para vivir, pero el que quiera disfrutar de ello debe ser conciente de los riesgos y

332
responsabilidades implícitos. Para los científicos, técnicos y demás trabajadores de la
protección civil el reto consiste en disparar alarmas con el tiempo suficiente para que nadie
salga herido. Para el decisor el desafío consiste en no interponer nada ni nadie en el transito
de los eventos naturales.­

En definitiva

� El rol de Defensa Civil en esta situación es transmitir los diagnósticos científicos


y técnicos a la población, notificar, evaluar el riesgo y establecer las áreas de
riesgo e informar a la población. Realizó y realiza exploración e Identificación
de áreas de riesgo; confección del Mapa de Riesgo Preliminar (el riesgo de
flujos de lodo no es más que uno de una lista de 19 hipótesis plausibles)
conjuntamente con Ejército Argentino; coordinación, cooperación y
acompañamiento a los científicos en sus respectivos estudios; formulación de
hipótesis a través de la observación empírica a los fines de ser analizada por
especialistas; levantamiento de datos solicitados por los especialistas para los
estudios en proceso; relevamiento y Monitoreo constante de las áreas sensibles
o de interés particular; a través de Ejercito Argentino limpieza y despeje de
cauces; a través de Unidad Ejecutora limpieza, despeje y definición de cauces y
áreas de depósito de flujos según modelado matemático; coordinación entre
Municipalidad y la Unidad Ejecutora; mapeo actual de áreas susceptibles de
riesgo; diagrama y ejecución de estrategias preventivas; ampliación de estudios
científico técnicos sobre riesgos ambientales; expresión cartográfica para
impulsar una nueva planificación territorial que contemple las componentes de
riesgo enunciadas; divulgar información a las autoridades (ejecutivas y
legislativas) y coordinar acciones en forma conjunta; divulgar información a
autoridades intermedias y coordinar acciones; divulgar información a la
población y coordinar acciones en forma conjunta; utilización de medios
gráficos, radiales, televisivos, reuniones informativas y casa por casa; planes de
evacuación; elaborar esquemas de notificación y de evacuación de posibles
afectados. Ejemplos: plan de evacuación sector de cabecera de Bº Las Piedritas;
protocolo estratégico de prevención; desarrollo de esquema de alertas;
desarrollo de Protocolo de Rescate de afectados por flujos de lodo
(aludes/lahares) en Zona Urbana; apoyo a Ministerio de Salud de la Provincia
del Neuquén de simulacro de rescate de afectados lahares/aludes; convenio con
Ejército Argentino.­
� La experiencia viva local resulta insuficiente para explicar el evento que
vivimos, predecir los eventos secundarios siguientes y proveer un recetario de
acciones a realizar ante el riesgo.­
� Todos los especialistas nacionales e internacionales que examinaron el evento
en curso en la localidad coincidieron en una alta probabilidades de ocurrencia
de flujos de lodo (ver referencia a aludes/lahares).­
� Cedric Larcher, el equipo SEGEMAR, el equipo UNEP de ONU y el equipo
integrado por los Dres. Villarosa y Córdova coinciden en sus diagnósticos. Los
tres primeros en su análisis y diagnóstico solicitaron el modelado matemático
realizado por el equipo Villarosa­Córdova.­

333
� Se ha realizado el modelado matemático en el marco de la emergencia y para
atender la emergencia.­
� Del estudio del equipo Villarosa­Córdova derivaron datos concretos de
velocidad, energía y profundidades de acumulación de material de descarga de
los flujos de lodo/aludes posibles.­
� Igualmente, los mismos estudios han permitido tener una designación de las
zonas sensibles potenciales.­
� De los mismos estudios se desprende que a la fecha y en las condiciones
actuales el orden de probabilidad de eventos es: 1º aludes de baja a mediana
intensidad; 2º aludes de mediana a alta intensidad y; 3º “que no ocurra nada”,
es decir, que el material se mantenga “quieto” y baje gradualmente a lo largo
del tiempo. La última de las tres posibilidades, teniendo en cuenta las
observaciones obtenidas mediante los monitoreos queda descartada ya que se
ha detectado la ocurrencia de flujos de baja a mediana intensidad.­
� En diversos puntos ya se han experimentado eventos del tipo de los primeros
señalados arriba. Si bien todos los habitantes deseamos que se den situaciones
sólo del tercer tipo es bueno tener en claro las diferencias entre la fe y la
ciencia.­
� Los disparadores de los eventos probables responden a las condiciones de
humedad ambiente, humedad del suelo, frío del aire y suelo, precipitaciones,
carga de nieve, pendiente, características del suelo preexistente; todas
condiciones que no se pueden manejar.­
� El período de más alta peligrosidad se debe a las condiciones primaverales,
lluvias torrenciales repentinas durante el verano y las lluvias del otoño. Es
decir, tiene una extensión aproximada desde esta fecha hasta fines de mayo­
junio. De proseguir las condiciones actuales nos encontraremos dentro del
mejor esquema de situación.­
� El actual Alerta Naranja es una alerta oficial y responde a la posible ocurrencia
de flujos de lodo (aludes/lahares) y la actividad del complejo volcánico
Puyehue­Cordón Caulle que sigue en actividad.­
� La operatoria de informar y aconsejar retirarse a las personas en riesgo de las
zonas peligrosas implica bajar la tasa a cero. Es decir, el riesgo nace de la
exposición de personas a una situación dada. Una vez que se delimitan las
zonas posibles y se retira a la gente de allí se diluye este riesgo en casi su
totalidad.­
� Adelantarse en tareas de educación, concientización y alerta ante el riesgo
sísmico y volcánico (caída de tefra) aumenta la capacidad de reacción de la
población y las autoridades. Mantener controles de monitoreo y seguimiento de
fenómenos naturales, ejecutar obras de infraestructura, mejorar los controles
municipales, realizar los ajustes necesarios en el Código de Planeamiento
Urbano y mejorar los sistemas de respuesta de emergencias facilitarán la
reacción ante crisis de naturaleza variada y mejorar la capacidad de mitigación,
rehabilitación post desastre, remediación alcanzando un nivel de resiliencia
excepcional.
� Resulta fundamental continuar avanzando en el estudio y análisis de la
totalidad de los riesgos potenciales a los que se encuentra expuesta la población
de Villa La Angostura.­

334
Equipo de trabajo

� Emilio Roberto Molla, Municipalidad de Villa La Angostura (con la


colaboración del Agrupamiento Villa La Angostura del Ejército Argentino).­
� Sarg. 1º Javier Gustavo Figueroa, esp GIS.EA.­ (Mapa de Riesgo Preliminar)
� Profesor Nacional en Educación Física, Alejandro Martín García Micocci, esp.
Montaña.­ (Mapa de Riesgo Preliminar)
� Cristian Sandoval, Jefe de Operaciones, COE Defensa Civil 2011, VLA.­
� Patricia Contreras, Defensa Civil MVLA, Cuerpo de Bomberos Voluntarios
VLA.­
� David Tressens, Secretario de Defensa Civil y Seguridad Vial, MVLA.­

GLOSARIO
FUENTES:
• OFDA: Programa USAID/OFDALAC de Asistencia Técnica y Capacitación.
• EIRD: Glosario de la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres; ¨Se trata de un esfuerzo de
revisión continuo a reflejarse en futuros informes de la secretaría como respuesta a una necesidad
expresada en diferentes reuniones internacionales, regionales y nacionales.

ALARMA (OFDA)
Aviso o señal que se da para que se sigan instrucciones específicas, debido a la presencia, inminente o real,
de un evento adverso.

ALCANCE DE CONTROL (OFDA)


Se define por el número de individuos que una persona puede tener a cargo (supervisar) con efectividad.
En eventos adversos es de 1 a 7.

ALERTA (DECLARACIÓN DE (OFDA)


Estado declarado con el fin de tomar precauciones específicas ante la probable y cercana ocurrencia de un
evento adverso. La declaración se basa en la información técnica que corresponda.

ALERTA TEMPRANA (OFDA)


Provisión de información oportuna y eficaz a través de instituciones identificadas, que permiten a
individuos expuestos a una amenaza, la toma de acciones para evitar o reducir su riesgo y su preparación
para una respuesta efectiva. Los sistemas de alerta temprana incluyen tres elementos, a saber: conocimiento y
mapeo de amenazas; monitoreo y pronóstico de eventos inminentes; proceso y difusión de alertas comprensibles a las
autoridades políticas y población; así como adopción de medidas apropiadas y oportunas en respuesta a tales alertas

AMENAZA (OFDA)
Factor externo al sujeto, objeto o sistema expuesto, representado por la potencial ocurrencia de un suceso
de origen natural o provocado por la actividad humana, que puede causar lesiones, muertes, daños
materiales, interrupción de la actividad social y económica o degradación ambiental, en un lugar
específico, con determinada intensidad y duración.

AMENAZA/PELIGRO (EIRD)
Fenómeno natural, substancia, actividad humana o condición peligrosa que puede causar la muerte,
lesiones u otros impactos en la salud, daños materiales, pérdida de medios de subsistencia, disrrupción de
la actividad social y económica o degradación ambiental.
Estos incluyen condiciones latentes que pueden derivar en futuras amenazas/peligros, los cuales pueden tener
diferentes orígenes: natural (geológico, hidrometeorológico y biológico) o antrópico (degradación ambiental y

335
amenazas tecnológicas). Las amenazas pueden ser individuales, combinadas o secuenciales en su origen y efectos.
Cada una de ellas se caracteriza por su localización, magnitud o intensidad, frecuencia y probabilidad.

AMENAZA BIOLÓGICA (EIRD)


Procesos de origen orgánico o transportados por vectores biológicos, incluidos la exposición a
microorganismos patógenos, toxinas y sustancias bioactivas, que pueden causar la muerte o lesiones,
pérdidas en medios de subsistencia y servicios, daños materiales, disfunciones sociales y económicas o
degradación ambiental. Ejemplos de amenazas biológicas: brotes de enfermedades epidémicas, enfermedades
contagiosas de origen animal o vegetal, plagas de insectos e infestaciones masivas.

AMENAZA GEOLÓGICA (EIRD)


Procesos o fenómenos naturales terrestres, que puedan causar pérdida de vida o daños materiales,
interrupción de la actividad social y económica o degradación ambiental. La amenaza geológica incluye
procesos terrestres internos (endógenos) o de origen tectónico, tales como terremotos, tsunamis, actividad de fallas
geológicas, actividad y emisiones volcánicas; así como procesos externos (exógenos) tales como movimientos en masa:
deslizamientos, caídas de rocas, avalanchas, colapsos superficiales, licuefacción, suelos expansivos, deslizamientos
marinos y subsidencias. Las amenazas geológicas pueden ser de naturaleza simple, secuencial o combinada en su
origen y efectos.

AMENAZAS HIDROMETEOROLÓGICAS (EIRD)


Procesos o fenómenos naturales de origen atmosférico, hidrológico u oceanográfico, que pueden causar la
muerte o lesiones, daños materiales, interrupción de la actividad social y económica o degradación
ambiental. Ejemplos de amenazas hidrometeorológicas son: inundaciones, flujos de lodo y detritos, ciclones
tropicales, frentes de tormentas, rayos/truenos, tormentas de nieve, granizo, lluvia y vientos y otras tormentas
severas; permagel (suelo permanentemente congelado, avalanchas de nieve o hielo; sequía, desertificación, incendios
forestales, temperaturas extremas, tormentas de arena o polvo.

AMENAZAS NATURALES (EIRD)


Procesos o fenómenos naturales que tienen lugar en la biosfera que pueden resultar en un evento
perjudicial y causar la muerte o lesiones, daños materiales, interrupción de la actividad social y económica
o degradación ambiental. Las amenazas naturales se pueden clasificar por origen en: geológicas,
hidrometeorológicas o biológicas. Fenómenos amenazantes pueden variar en magnitud o intensidad, frecuencia,
duración, área de extensión, velocidad de desarrollo, dispersión espacial y espaciamiento temporal.

AMENAZAS TECNOLÓGICAS (EIRD)


Amenaza originada por accidentes tecnológicos o industriales, procedimientos peligrosos, fallos de
infraestructura o de ciertas actividades humanas, que pueden causar muerte, lesiones, enfermedades,
daños materiales, pérdidas en medios de subsistencia y servicios, disrrupción de la actividad social y
económica o degradación ambiental. Ejemplos: contaminación industrial, actividades nucleares y radioactividad,
deshechos tóxicos, rotura de presas; accidentes de transporte, industriales o tecnológicos (explosiones, fuegos,
derrames).

ANÁLISIS DE AMENAZAS/PELIGROS (EIRD)


Estudios de identificación, mapeo, evaluación y monitoreo de una(s) amenaza(s) para determinar su
potencialidad, origen, características y comportamiento.

ANALISIS DE RIESGOS (EIRD)


Uso sistemático de la información disponible para determinar la probabilidad de ocurrencia de ciertos
eventos adversos así como la magnitud de las posibles consecuencias.

ASISTENCIA/RESPUESTA (EIRD)
Provisión de ayuda o intervención durante o inmediatamente después de un desastre, tendiente a
preservar de la vida y cubrir las necesidades básicas de subsistencia de la población afectada. Cubre un
ámbito temporal inmediato, a corto plazo, o prolongado.

336
BONO DE CATÁSTROFE (cat bond)
Es un bono que transfiere los riesgos al mercado global de capitales.

CAPACIDAD (de una comunidad) (EIRD)


Combinación de todas las fortalezas, atributos y recursos disponibles dentro de una comunidad, sociedad
u organización que pueden ser usadas para el logro de sus metas. El concepto de capacidad puede incluir
medios físicos, institucionales, sociales o económicos así como cualidades personales o colectivas tales como liderazgo
y gestión. La capacidad puede también ser descrita como aptitud. Entre las metas puede estar reducir el nivel de
riesgo, o los efectos de un evento o desastre.

CENTRO DE OPERACIONES DE EMERGENCIA (COE) (OFDA)


Conjunto de representantes de las diferentes instituciones que tienen la responsabilidad de asistir a la
comunidad afectada por un incidente, reunidos en una instalación fija, previamente establecida, con el
objeto de coordinar el uso eficiente de los recursos de respuesta y de retornar la situación a la normalidad.
Desde el COE se ejerce el Comando de las Operaciones de Emergencia a nivel de esa comunidad. Está respaldado por
procedimientos regulados y elementos administrativos y jurídicos particulares de cada país.

CÓDIGOS DE CONSTRUCCIÓN (EIRD)


Ordenanzas y regulaciones que rigen el diseño, construcción, materiales, alteración y ocupación de
cualquier estructura para la seguridad y el bienestar de la población. Los códigos de construcción incluyen
estándares técnicos y funcionales.

COMANDO (OFDA)
Acción y efecto de impulsar, asignar, orientar y conducir los recursos para lograr un objetivo.

COMANDO UNIFICADO (principio administrativo de Unidad de mando) (OFDA)


Función prevista en el Sistema de Comando de Incidentes (SCI) para que todas las instituciones que tienen
competencia en un mismo incidente desarrollen conjuntamente objetivos y estrategias comunes que
contemplen adecuadamente sus políticas y necesidades.
Las autoridades designadas por cada una de las instituciones competentes, contribuyen de común acuerdo al proceso
de comando a través de:
– Determinar los objetivos.
– Planificar en forma conjunta las actividades y conducir operaciones integradas.
– Maximizar la eficacia y la eficiencia en el uso de todos los recursos asignados.
­ Asignar las funciones del personal bajo UN solo Plan de Acción del Incidente.

CONCIENTIZACIÓN PÚBLICA (EIRD)


Información a la población en general, tendiente a incrementar los niveles de conciencia de la población
respecto a riesgos potenciales y sobre acciones a tomar para reducir su exposición a las amenazas.
Esto es particularmente importante para funcionarios públicos en el desarrollo de sus responsabilidades con el
propósito de salvar vidas y propiedades en caso de desastre. Las actividades de concientizacion pública promueven
cambios de comportamiento que conducen a una cultura de reducción del riesgo. Esto implica información pública,
difusión, educación, emisiones radiales y televisivas y el uso de medios impresos, así como el establecimiento de
centros, redes de información y acciones comunitarias participativas.

DEGRADACIÓN AMBIENTAL (EIRD)


La disminución de la capacidad del ambiente para responder a las necesidades y objetivos sociales y
ecológicos. Los efectos potenciales son variados y pueden contribuir al incremento de la vulnerabilidad, frecuencia e
intensidad de las amenazas naturales. Algunos ejemplos: degradación del suelo, deforestación, desertificación,
incendios forestales, pérdida de la biodiversidad, contaminación atmosférica, terrestre y acuática, cambio climático,
aumento del nivel del mar, pérdida de la capa de ozono.

DESARROLLO DE CAPACIDAD (EIRD)


Esfuerzos dirigidos al desarrollo de habilidades humanas o infraestructuras sociales, dentro de una
comunidad u organización, necesarios para reducir el nivel del riesgo. En términos generales, el desarrollo de
capacidad también incluye el acrecentamiento de recursos institucionales, financieros y

337
políticos entre otros; tales como la tecnología para diversos niveles y sectores de la sociedad.

DESARROLLO SOSTENIBLE (EIRD)


Desarrollo que cubre las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones
futuras de cubrir sus propias necesidades. Incluye dos conceptos fundamentales: “necesidades”, en particular
aquellas inherentes a los pobres, a quienes se debe dar prioridad; y la idea de “limitaciones” de la capacidad del
ambiente para resolver necesidades presentes y futuras, impuestas por el estado de la tecnología y la organización
social. (Comisión Brundtland,1987). El desarrollo sostenible se basa en el desarrollo sociocultural, la estabilidad y
decoro político, el crecimiento económico y la protección del ecosistema, todo ello relacionado con la reducción del
riesgo de desastres.

DESARROLLO SOSTENIBLE/SUSTENTABLE (OFDA)


Aumento acumulativo y durable de cantidad y calidad de bienes, servicios y recursos de una comunidad,
unido a cambios sociales tendientes a mejorar la seguridad y la calidad de vida, sin comprometer los
recursos de las generaciones futuras. Se basa en el desarrollo sociocultural, la estabilidad y decoro político, el
crecimiento económico y la protección del ecosistema, todo ello relacionado con la reducción de riesgos de desastre.

DESASTRE (OFDA)
Alteraciones en las personas, la economía, los sistemas sociales y el ambiente, causadas por sucesos
naturales, por actividad humana o por la combinación de ambos, que superan la capacidad de respuesta
de la comunidad afectada.

DESASTRE (EIRD)
Disrupción seria del funcionamiento de una comunidad o sociedad que causa pérdidas humanas e
importantes pérdidas materiales, económicas o ambientales; que exceden la capacidad de la comunidad o
sociedad afectada para hacer frente a la situación utilizando sus propios recursos. Un desastre es función del
proceso de riesgo. Resulta de la combinación de amenazas, condiciones de vulnerabilidad e insuficiente capacidad o
medidas para reducir las consecuencias negativas y potenciales del riesgo.

ECOSISTEMA (EIRD)
Conjunto complejo de relaciones entre organismos vivos que funcionan como una unidad e interactúan
con su ambiente físico. Los límites de lo que se podría denominar un ecosistema son algo arbitrarios, dependiendo
del enfoque o del estudio. Así, el alcance de un ecosistema puede extenderse desde escalas espaciales muy pequeñas
hasta, en última instancia, la Tierra entera (IPCC, 2001).

EL NIÑO – Oscilación del Sur –ENOS­ (EIRD)


Interacción compleja del océano pacífico tropical y la atmósfera global que resulta en cambios de los
patrones oceánicos y meteorológicos en diversas partes del planeta; produce frecuentemente impactos
significativos como alteración en el hábitat
marino y en las precipitaciones pluviales provocando inundaciones, sequías y cambios en los patrones de
tormentas. El Niño, como parte de ENOS, se refiere a temperaturas oceánicas bien por encima de la media a lo largo
de las costas de Ecuador, Perú y norte de Chile, así como a lo largo del océano Pacífico en su zona ecuatorial este;
mientras que la Oscilación Sur se refiere a los patrones mundiales asociados de cambios en las precipitaciones y
presión atmosférica. La Niña se refiere a
patrones o condiciones aproximadamente inversas a El Niño. Estos fenómenos pueden durar varias temporadas.

EMERGENCIA (OFDA)
Evento adverso que requiere una atención inmediata y que la comunidad afectada puede resolver con sus
propios recursos.

ESCENA (en Sistema de Comando de Incidentes) (OFDA)


Lugar de impacto directo del incidente. Requiere presencia del Comandante del Incidente.

338
ESCENARIO (en Sistema de Comando de Incidentes) (OFDA)
Área indirectamente afectada por el incidente o que presenta otro u otros incidentes agregados. Puede
requerir movilización del COE.

ESCENARIO DE RIESGO (OFDA)


Descripción de las características de un evento detonador específico con los consecuentes efectos directos e
indirectos esperados.

ESTRUCTURA DEL SISTEMA DE COMANDO DE INCIDENTES (OFDA)


Es una estructura funcional modular. Las funciones en que se basa son ocho: Comando del Incidente,
Seguridad, Información Pública, Enlace, Planificación, Operaciones, Logística, Administración/Finanzas

ESTUDIO DE IMPACTO AMBIENTAL –EIA­ (EIRD)


Estudios llevados a cabo para evaluar el efecto sobre un ambiente específico debido a la introducción de
un nuevo factor, que puede alterar el equilibrio ecológico existente. EIA es una herramienta que permite
formular políticas o regulaciones que sirvan para proporcionar evidencia y análisis de los impactos ambientales de
actividades, desde su concepción hasta la toma de decisiones. Se utiliza extensivamente en programas nacionales y en
proyectos internacionales de asistencia para el desarrollo. Un EIA debe incluir una evaluación detallada de riesgos y
proporcionar
soluciones alternativas.

EVALUACIÓN DEL RIESGO/ANÁLISIS (EIRD)


Metodología para determinar la naturaleza y el grado de riesgo a través del análisis de amenazas
potenciales y evaluación de condiciones existentes de vulnerabilidad que en conjunto pudieran dañar a la
población expuesta, propiedades, medios de subsistencia y al ambiente del cual dependen.
El proceso de evaluación de riesgos (y su mapeo) se basa en una revisión tanto de las características técnicas de
amenazas, a saber: su ubicación, magnitud o intensidad, frecuencia y probabilidad; así como en el análisis de las
dimensiones físicas, sociales, económicas y ambientales de la vulnerabilidad y exposición; con especial consideración a
la capacidad de enfrentar los diferentes escenarios del riesgo.

EVENTO Suceso programado o no programado; puede ser social, deportivo, artístico u otro.

EVENTO ADVERSO (OFDA) Alteraciones en las personas, la economía, los sistemas sociales y el
ambiente, causadas por sucesos naturales, por actividad humana o por la combinación de ambos, que
requieren una atención inmediata.

EXPOSICIÓN (EIRD)
Personas, propiedades, sistemas u otros elementos presentes en zonas peligrosas que por eso están
potencialmente sujetos a pérdidas. Las medidas de exposición pueden incluir el número de personas o tipos de
bienes en un lugar. Esto puede combinarse con la vulnerabilidad específica de los elementos expuestos a una amenaza
en particular para estimar cuantitativamente el riesgo asociado con dicha amenaza en el área de interés.

FINANCIAMIENTO DE LA COBERTURA DE ACTIVOS PÚBLICOS


Proceso por el cual los gobiernos buscan financiar la reconstrucción de activos públicos críticos que
puedan resultar dañados y que son indispensables para restaurar el crecimiento económico después de un
desastre.

GASES INVERNADERO (EIRD)


Un gas, tal como vapor de agua, bióxido de carbono, metano, clorofluorocarbonos (CFCs) e
hidroclorofluorocarbonos (HCFCs), que absorbe y re­emite la radiación infrarroja, calentando la superficie
terrestre y contribuyendo al cambio climático (UNEP,1998).

GESTIÓN DE EMERGENCIAS (EIRD)


Organización y gestión de recursos y responsabilidades para el manejo de todos los aspectos de las
emergencias, en particular preparación, respuesta y rehabilitación. La gestión de emergencias incluye planes,
estructuras y acuerdos que permitan comprometer los esfuerzos del gobierno de entidades voluntarias y privadas de

339
una manera coordinada y comprensiva para responder a todas las necesidades asociadas con una emergencia. El
concepto gestión de emergencias es también conocido como “gestión de desastres”.

GESTIÓN DE RIESGOS (OFDA)


Es una actitud y una conducta que la sociedad debe manifestar en la disposición y en la acción de
identificar riesgos, anularlos o reducirlos a la mínima expresión posible y de disponer los recursos y
procedimientos necesarios para la atención, recuperación y desarrollo de la comunidad ante los eventos
adversos. Es administración, entendida como subsistema regulador del sistema social, dedicada a los riesgos.

GESTIÓN DE RIESGO DE DESASTRES (EIRD)


Proceso sistemático de utilización de decisiones administrativas, de organización y habilidades
operacionales, y de capacidades para implementar estrategias y políticas y fortalecer esas capacidades a fin
de reducir el impacto de amenazas naturales y la posibilidad de desastre. La gestión de riesgo de desastres
apunta a evitar, disminuir o transferir los efectos adversos de las amenazas a través de acciones y medidas de
prevención, mitigación y preparación.

GOBERNABILIDAD1
Consiste en ejercer la autoridad en materia económica, política y administrativa en relación con los asuntos
de un país en todos sus niveles (estado, departamento, provincia, municipio u otra unidad político
administrativa formal). Consta de mecanismos, procesos e instituciones que los ciudadanos y los grupos utilizan
para articular sus intereses, ejercer sus legítimos derechos, cumplir con sus obligaciones y dirimir sus diferencias.
Combina actividades estatales, no estatales y las del sector privado.

INCENDIOS FORESTALES (EIRD)


Cualquier fuego producido en áreas vegetales independientemente de sus fuentes de ignición, daños o
beneficios.

INCIDENTE (OFDA)
Evento no deseado que puede involucrar personal de servicios de emergencia que actúen para prevenir o
mitigar las pérdidas de vidas o daños a los bienes y al ambiente.

INCIDENTE (Materiales Peligrosos, NFPA 472/2007) Una emergencia que involucra la liberación o
potencial liberación de materiales peligrosos o armas de destrucción masiva (WMD/ADM).

INCIDENTE POR MATERIALES PELIGROSOS (OFDA)


Evento no deseado, que incluye la liberación o potencial liberación de materiales peligrosos, en el que
personas expuestas se enferman o adquieren la posibilidad de enfermarse más adelante, sean días, meses o
años después.

INFORMACIÓN PÚBLICA (EIRD)


Información, hechos y conocimientos adquiridos o aprendidos como resultado de investigación o estudio,
disponible para ser difundida al público.

INTENSIDAD (macro sísmica) Escala de consecuencias de un terremoto en un sitio en particular, medida


de acuerdo a los efectos sobre las personas, estructuras y materiales de tierra. Las escalas de intensidad
más comúnmente usadas son: la de Mercalli modificado (MM) y la de Medvedev, Sponheuer y Karnik
(MSK), ambas tienen 12 grados.

LA NIÑA (véase El Niño­Oscilación Sur). (EIRD)

MAGNITUD (escala de Richter)


Índice de energía sísmica liberada por un terremoto.

MEDIDAS ESTRUCTURALES Y NO ESTRUCTURALES (EIRD)


Medidas de ingeniería y de construcción tales como protección de estructuras e infraestructuras para
reducir o evitar el posible impacto de amenazas. Las medidas no estructurales se refieren a políticas,
concientización, desarrollo del conocimiento, compromiso público, y métodos o prácticas operativas,

340
incluyendo mecanismos participativos y suministro de información, que puedan reducir el riesgo y
consecuente impacto.

MEDIDAS ESTRUCTURALES (EIRD)


Medidas de ingeniería y de construcción tales como normas y técnicas para la protección de estructuras e
infraestructuras a fin de reducir o evitar el riesgo de daño o destrucción.

MEDIDAS NO ESTRUCTURALES (EIRD)


Se refieren a políticas, concientización, desarrollo del conocimiento, compromiso público, métodos y
prácticas operativas, mecanismos participativos y suministro de información que puedan reducir riesgos.
En el ámbito político­administrativo, se suelen denominar medidas estructurales las decisiones que pasan a ser
políticas públicas, las regulaciones que son elevadas a normas formales como Ordenanzas o Leyes y en general las que
modifican sustancialmente el sistema social y tienen cierta perdurabilidad.

MITIGACIÓN
Conjunto de medidas y acciones sobre la amenaza, la vulnerabilidad o ambas, dirigidas a reducir riesgos.

OPERACIÓN (en Sistema de Comando de Incidentes) (1) Actividad de respuesta o rehabilitación durante
un evento adverso.

OPERATIVO/S (como un uso del Sistema de Comando de Incidentes) (1) Preparación y organización para
acciones que no son en respuesta a un evento adverso sino desarrollado y aplicado para seguridad de
eventos artísticos, deportivos, religiosos, políticos, etc.

ORGANIZACIÓN MODULAR
Es la que posee una estructura flexible que le permite expansión (movilización de unidades de trabajo) y
contracción (desmovilización de unidades de trabajo) según las necesidades operativas.

PERÍODO OPERACIONAL (en Sistema de Comando de Incidentes) (1) Intervalo de tiempo en el que se
espera lograr los objetivos formulados en el Plan de acción del Incidente. Puede haber más de uno y varían
de 1 a 24 horas.

PLAN DE ACCIÓN DEL INCIDENTE (PAI) (OFDA)


Formulación de objetivos y estrategias; identificación, disposición y asignación táctica de los recursos; y
establecimiento de la estructura para controlar el incidente. Se prepara para intervalos de tiempo específicos,
llamados Períodos Operacionales. Fuentes de recursos complementarios

PLANIFICACIÓN DE CONTINGENCIA (EIRD)


Proceso de gestión que analiza potenciales eventos específicos o situaciones de emergencia que pudieran
amenazar a la sociedad o al ambiente y establecer medidas anticipadas para posibilitar una respuesta
oportuna y apropiada para tales eventos y situaciones. Proporciona cursos de acción organizados y coordinados,
con una clara identificación de los roles institucionales y recursos, procesos de información y medidas operacionales
para los actores específicos necesarios. Basados en escenarios de posibles condiciones de emergencia u desastre,
permite a los actores clave anticiparse y resolver problemas que podrían presentarse durante la crisis. Es parte
importante de la preparación. Los planes de contingencia deben ser actualizados y ejercitados regularmente.

PLANIFICACIÓN TERRITORIAL (EIRD)


Rama de la planificación física y socio­económica que determina los medios y evalúa el potencial o
limitaciones de varias opciones de uso del suelo, con los correspondientes efectos en diferentes segmentos
de la población o comunidad cuyos intereses han sido considerados en la toma de decisiones. La
planificación territorial incluye estudios, mapeo, análisis de información ambiental y sobre amenazas, así como
formulación de decisiones alternativas sobre uso del suelo y diseño de un plan de gran alcance a diferentes escalas
geográficas y administrativas. Puede ayudar a mitigar desastres y reducir riesgos, desmotivando los asentamientos
humanos de alta densidad y la construcción de instalaciones estratégicas en áreas propensas a amenazas; así como al
favorecer el control de la densidad poblacional y su expansión, el adecuado trazado de rutas de transporte, conducción
energética, agua, alcantarillado y otros servicios vitales.

341
PREPARACIÓN (OFDA)
Conjunto de medidas y acciones para reducir al mínimo la pérdida de vidas humanas y otros daños,
organizando oportuna y eficazmente la respuesta.

PREPARACIÓN
Actividades y medidas tomadas anticipadamente para asegurar una respuesta eficaz ante el impacto de
amenazas, incluyendo la emisión oportuna y efectiva de sistemas de alerta temprana y la evacuación
temporal de población y propiedades del área amenazada.

PRESUPUESTO DE AUTO ASEGURO


Modesto presupuesto anual, asignado por el dueño de una propiedad, para inversiones en mejoras,
mantenimiento y remodelaciones selectas de su bien (edificios, terrenos, infraestructura) que ayude a
reducir futuras pérdidas esperadas por determinados eventos adversos.

PREVENCIÓN (EIRD)
Actividades tendientes a evitar el impacto adverso de amenazas, y medios empleados para minimizar los
desastres ambientales, tecnológicos y biológicos relacionados con dichas amenazas. Dependiendo de la
viabilidad social y técnica y de consideraciones de costo/beneficio, la inversión en medidas preventivas se justifica en
áreas afectadas frecuentemente por desastres. En este contexto, la concientización y educación pública relacionadas
con la reducción del riesgo de desastres, contribuyen a cambiar la actitud y los comportamientos sociales, así como a
promover una “cultura de prevención”.

PREVENCIÓN (OFDA)
Conjunto de medidas y acciones para impedir o evitar que sucesos naturales o provocados por la actividad
humana, causen eventos adversos.

PROCEDIMIENTOS (en Sistema de Comando de Incidentes) (OFDA)


Instrumentos propios de las instituciones y grupos, en los que se detallan tareas, pasos y normas para
ejecutar cada actividad específica de su competencia. Pueden estar contenidos en hojas, fichas o manual de
procedimientos.

PROTOCOLO (en Sistema de Comando de Incidentes) (OFDA)


Acuerdo que, basado en las responsabilidades, competencias y jurisdicciones formales de las instituciones,
determina las atribuciones de cada una a fin de coordinar las acciones según el operativo o la operación
que demande un escenario de riesgo definido, o un incidente potencial o real. Puede contener algunos
procedimientos de carácter general.

PRONÓSTICO
Declaración definida o estimación estadística de la ocurrencia de un acontecimiento futuro. (UNESCO,
WMO). Este término tiene significados diferentes según la disciplina.

REASEGURO
Seguro de las compañías aseguradoras. Es la transferencia del riesgo a un segundo asegurador por parte
de la compañía que ha adquirido el riesgo de sus clientes.

RECUPERACIÓN (EIRD)
Decisiones y acciones tomadas luego de un desastre con el objeto de restaurar las condiciones de vida de la
comunidad afectada, mientras se promueven y facilitan a su vez los cambios necesarios para la reducción
de desastres. La recuperación (rehabilitación y reconstrucción) es una oportunidad para desarrollar y aplicar
medidas para reducir el riesgo de desastres.

REDUCCIÓN DEL RIESGO DE DESASTRES (Curso RRD)


Marco conceptual de elementos que tienen la función de minimizar vulnerabilidades y riesgos en una
sociedad, para evitar (prevención) o limitar (mitigación y preparación) el impacto adverso de amenazas,
dentro del amplio contexto del desarrollo sostenible. El marco conceptual referente a la reducción del riesgo de

342
desastres se compone de los siguientes campos de acción, según lo descrito en la publicación de la EIRD “Vivir con el
riesgo: informe mundial sobre iniciativas de reducción de desastres”, Ginebra
2002, página 23; retomados en el presente informe.
• Evaluación del riesgo, incluyendo análisis de
• Vulnerabilidad, así como análisis y monitoreo de amenazas;
• Concientización para modificar el comportamiento
• Desarrollo del conocimiento, incluyendo información, educación y capacitación e investigación;
• Compromiso político y estructuras institucionales, incluyendo organización, política, legislación y acción
comunitaria;
• Aplicación de medidas incluyendo gestión ambiental, prácticas para el desarrollo social y económico, medidas físicas
y
tecnológicas, ordenamiento territorial y urbano, protección de servicios vitales y formación de redes y alianzas.;
• Sistemas de detección y alerta temprana incluyendo pronóstico, predicción, difusión de alertas, medidas de
preparación y capacidad de enfrentar.

REDUCCIÓN DE RIESGO DE DESASTRE (EIRD)


Concepto y práctica de reducción de desastres por medio de los esfuerzos sistemáticos para analizar y
manejar los factores causales, incluyendo la disminución de la exposición, la reducción de la
vulnerabilidad de personas y bienes, el manejo del uso de la tierra y del ambiente, y el mejoramiento de la
preparación para eventos adversos.

REFORZAMIENTO (EIRD)
Refuerzo de estructuras para hacerlas más resistentes a las fuerzas de amenazas naturales. El reforzamiento
implica la consideración de cambios en la masa, rigidez, humedad, trayectoria de carga y ductilidad de materiales y
puede implicar cambios radicales tales como la introducción de reguladores de absorción energética y sistemas de
aislamiento adecuados. Ejemplos de reforzamiento son la consideración de carga del viento para consolidar y
minimizar su fuerza, o en áreas propensas a terremotos, el refuerzo de estructuras.

RECONSTRUCCIÓN (OFDA)
Proceso de reparación a mediano y largo plazo, del daño físico, social y económico, a un nivel de
desarrollo superior al existente antes del impacto del evento adverso.

REHABILITACIÓN (OFDA)
Recuperación, a corto plazo, de los servicios básicos e inicio de la reparación del daño físico, social y
económico. Aproximación al estado anterior al evento hasta que se inicia la reconstrucción.

RESILIENCIA/RESILIENTE (del Latín, resilio, retorno después de vuelta, salto o rebote; elasticidad) (EIRD)
Capacidad de un sistema, comunidad o sociedad potencialmente expuestas a amenazas a adaptarse,
resistiendo o cambiando con el fin de alcanzar y mantener un nivel aceptable en su funcionamiento y
estructura. Se determina por el grado en el cual el sistema social es capaz de auto­organizarse para incrementar su
capacidad de aprendizaje sobre desastres pasados con el fin de lograr una mejor protección futura y mejorar las
medidas de reducción de riesgo de desastres En el campo social “capacidad humana que permite, a personas que han
pasado por situaciones adversas, estar no solamente seguras sino también transformadas por esa experiencia”.

RESPUESTA (1)
Acciones llevadas a cabo inmediatamente ocurrido un evento adverso y que tienen por objeto salvar vidas,
reducir el sufrimiento y disminuir pérdidas. Comprende atención a las personas, a los bienes y al
ambiente.

RIESGO (EIRD)
La combinación de la probabilidad de un evento y sus consecuencias negativas.

RIESGO (EIRD)
Probabilidad de consecuencias perjudiciales o perdidas esperadas (muertes, lesiones, propiedad, medios
de subsistencia,
interrupción de actividad económica o deterioro ambiente) resultado de interacciones entre amenazas
naturales o antropogénicas y condiciones de vulnerabilidad. Convencionalmente el riesgo es expresado por la

343
expresión Riesgo = Amenazas x vulnerabilidad. Algunas disciplinas también incluyen el concepto de exposición para
referirse principalmente a los aspectos físicos de la vulnerabilidad. Más allá de expresar una posibilidad de daño físico,
es crucial reconocer que los riesgos pueden ser inherentes, aparecen o existen dentro de sistemas sociales. Igualmente
es importante considerar los contextos sociales en los cuales los riesgos ocurren, por consiguiente, la población no
necesariamente comparte las mismas percepciones sobre el riesgo y sus causas subyacentes.

RIESGO (OFDA)
Probabilidad de exceder un valor específico de daños, en un lugar dado y durante un tiempo de
exposición determinado. Ese valor específico se refiere a los daños que determinada comunidad está
dispuesta a aceptar considerando los beneficios de hacerlo.

RIESGO ACEPTABLE (EIRD)


Nivel de pérdidas, que una sociedad o comunidad considera aceptable, dadas sus existentes condiciones
sociales, económicas, políticas, culturales y ambientales. En términos de ingeniería, el concepto de riesgo
aceptable se usa también para definir medidas estructurales y no estructurales implementadas para reducir posibles
daños hasta un nivel en el no afecte la población y propiedades, de acuerdo a códigos o “prácticas aceptadas” basadas,
entre otras variables, en una probabilidad conocida sobre la ocurrencia de una determinada amenaza.

SISTEMA
Ordenamiento de elementos interdependientes, relacionados entre sí y con su entorno, que procuran un
mismo objetivo.

SISTEMA DE COMANDO DE INCIDENTES (SCI) (OFDA)


Organización con una estructura modular funcional preconcebida para atender incidentes, reales o
potenciales, que integra instalaciones, equipamiento, personal, procedimientos y comunicaciones de una o
múltiples instituciones, a fin de operar coordinadamente con eficacia y eficiencia.
Los principios de administración que desde el comienzo del siglo XX, mejoraron la eficiencia de diversos tipos de
instituciones,
son la base de los siguientes principios del SCI:
• Unidad de mando ­ Comando Unificado
• Alcance de control
• Terminología común
• Organización modular
• Comunicaciones integradas • Consolidación de planes en un Plan de Acción del Incidente (PAI)
• Instalaciones señalizadas, con denominación precisa y ubicación determinada
• Manejo integral de los recursos

SISTEMA DE COMANDO DE INCIDENTES (SCI­NFPA 472/2007)


Sistema de gestión diseñado para posibilitar el manejo eficaz y eficiente en la escena del incidente,
mediante la integración de instalaciones, equipamiento, personal, procedimientos y comunicaciones
operando dentro de una estructura organizacional común.

SEGURO
Contrato por el que una empresa (aseguradora) se compromete a asumir el riesgo de ocurrencia de un
acontecimiento incierto, obligándose a pagar las pérdidas que pueda sufrir el tomador por efecto del
riesgo determinado en dicho acuerdo. En contraprestación el tomador debe pagar una prima al
asegurador.

SISTEMAS DE INFORMACIÓN GEOGRÁFICOS (SIG)


Análisis que combinan base de datos relacionales con interpretación espacial y resultados generalmente en
forma de mapas. Una definición más elaborada es la de programas de computador para capturar, almacenar,
comprobar, integrar, analizar y suministrar datos terrestres georeferenciados. Los sistemas de información
geográficos se están utilizando con mayor frecuencia en el mapeo y análisis de amenazas y vulnerabilidad, así como
para la aplicación de medidas encaminadas a la gestión del riesgo de desastres.

344
SISTEMA INTEGRADO DE INFORMACIÓN
Base de datos de las amenazas, vulnerabilidades y riesgos, y de la capacidad de alerta, respuesta y otros
procesos de gestión, integrada a una red, esencial para la toma de decisiones y priorización de actividades,
que está al servicio de las instituciones y de la población.

TRANSFERENCIA DEL RIESGO


Instrumentos de protección contra riesgos económicos antes de que ocurran pérdidas.

TRIAJE (TRIAGE) (OFDA)


Procedimiento de clasificación para determinar la prioridad de atención de las víctimas de un evento
adverso, en relación con la disponibilidad de servicios, según la gravedad de su estado y la probabilidad
de supervivencia si reciben los cuidados médicos inmediatos que necesitan.

UNIDAD DE MANDO ((OFDA))


Principio de administración: cada persona, dentro de la organización, responde e informa solamente a la
persona designada como su inmediato superior. Ninguna persona debe tener más de un jefe.

VULNERABILIDAD (OFDA)
Factor interno de un sujeto, objeto o sistema expuesto a una amenaza, que corresponde a su disposición
intrínseca a ser dañado.

VULNERABILIDAD (EIRD)
Condiciones determinadas por factores o procesos físicos, sociales, económicos, y ambientales, que
aumentan la susceptibilidad de una comunidad al impacto de amenazas. Para factores positivos que
aumentan la habilidad de las personas o comunidad para hacer frente con eficacia a las amenazas, véase la definición
de capacidad.

Bibliografía y datos utilizados

� Información recabada por la Oficina de Inspecciones de la Municipalidad de


Villa La Angostura, Dirección de Medio Ambiente y Oficina de Catastro.
� Mapeos planoaltimétricos, relevamiento edilicio del Ejido Urbano, relevamiento
y mapeos de cuencas, usos del territorio y análisis geomorfológico y forestal de
las laderas, cuencas, humedales dentro y fuera del sector edificado obrantes en
oficinas de la Municipalidad de Villa La Angostura.
� Estudios ambientales presentados ante la Municipalidad de Villa La Angostura
a los fines de la aprobación y desarrollo de proyectos públicos y privados.
� Información recabada por el Lic. En Geología Iván Neila y el Lic. En Biología
Claudio Romero.
� Monitoreo de altas cuencas realizado por Fabian Fasce y los autores.
� Monitoreo e historial climático local realizado por el Farmaceutico Eduardo
Segurel.
� Entrevistas a viejos pobladores realizadas en estudios particulares del Tec.
Emilio R. Molla.
� Artículo publicado en internet y diarios digitales “Algunos Apuntes para el
Planeamiento de Villa La Angostura y la Administración Municipal”, Emilio
Roberto Molla, mayo de 2007.­
� Monografía publicada en internet y diarios digitales “Ensayo Preliminar para el
Estudio del Hábitat, la Vivienda y el Uso de la Tierra en Villa La Angostura”,
Emilio R. Molla, junio de 2010.­

345
� Archivos fotográficos de la Sra. Marina Frixione y los Sres. Cristian Sandoval,
Ricardo Has y Fabian Fasce.­
� Trabajos, apuntes y esquemas brindados por el Sr. Emilio Arias de la Dirección
Provincial de Defensa Civil de la Provincia del Neuquén.­
� Trabajos realizados por INIBIOMA­CONICET­UNCo.­

Agradecimiento especial para el Sr. Gobernador Don Jorge Sapag, Sra. Vice
Gobernadora Ana Pechen, Cuadros del Agrupamiento Villa La Angostura de Ejército
Argentino, Gendarmería Nacional, Emilio Arias, Fabian Vincent, Martin Galgano,
Laboratorio Meteorología Aerolíneas Argentinas­Austral Líneas Aéreas, Fabian Fasce,
Carlos Almada, Pablo Calderón, Ricardo Has, Raúl Elgueta, Pablo Esquivel, Grupo de
Rescate Villa La Angostura (BRZA), Ing. Daniel Meier, Bromatólogo Alejandro Murcia,
Javier Jara, Mario Tierno, Mayor Hernán Rodríguez Murgana, Dr. Gustavo Villarosa,
Dr. Gustavo Córdoba, Lic. Valeria Outes, Lic. Rafael González, Lic. Alejandra Tejedo,
Lic. Valerie Baumann, Lic. Manuela Elissondo, Lic. A. Sruoga, Lic. Luis Fauque, Dr. A.
Caselli, Dra. Adriana Bermúdez, Dr. Jean Schneider y Psicólogo Fernando Harris.­

Agradecimiento especial para con las acciones y personas que resultaron de


trascendencia durante la situación de emergencia
(eventos y actuaciones destacadas y destacables del 04 de junio a diciembre de 2011)

Operaciones
A las 11 horas del día sábado 04 de junio, ante la inminencia de la erupción del
CVPCC, comenzó a reunirse personal de las instituciones presentes en Villa La
Angostura para conformar el Comando de Operaciones de Emergencia bajo la
dirección del Intendente Municipal Dr. Ricardo Alonso y el Secretario de Defensa Civil
David Tressens Ripoll. Secundándolo el Director de Defensa Civil Marcos Arretche
desempeñándose hasta la última semana de junio retomando funciones en el mes de
octubre. Las instituciones presentadas fueron Gendarmería Nacional bajo el mando
del Comandante Rubén Olima; Prefectura Naval Argentina bajo las órdenes del
Subprefecto Juan Pablo Squarzon; Parques Nacionales bajo el comando y coordinación
del Guardaparques Domingo Núñez (posteriormente como oficial de enlace del
C.O.E.); Comisaría 28 de la Policía de la Provincia del Neuquén bajo el mando del
Comisario José Miguel Cuadrado; Brigada de Incendios Forestales bajo el comando del
Sr. Javier Jara (coordinando voluntarios de los barrios Mallín y Margaritas); delegación
local de ALPA Sres. Rubén Núñez e Ing. Rodolfo Herrero; Hospital local bajo la
dirección de la Dra. Alejandra Piedecasas; Bomberos Voluntarios de Villa La
Angostura a cargo del Jefe Mario Tierno; Grupo de Rescate bajo comando del Sr. Raúl
Elgueta; cuerpo de voluntarios coordinado bajo las órdenes del Sr. Facundo Olea y la
Sra. Lucrecia Ochoa; y miembros del personal municipal de distintas áreas en
respuesta inmediata y voluntaria. La suma de voluntarios y otros elementos civiles
operativos fluctuó durante la emergencia en una cifra de 500 personas. En horas de la
tarde se presentó el piloto internacional de Aerolíneas Argentinas Martin Galgano
tomando la responsabilidad de llevar adelante el laboratorio de información
meteorológica. A cargo del servicio eléctrico el Sr. Javier Abraham de EPEN, a cargo
del mantenimiento en funcionamiento del sistema de provisión de agua potable a
cargo del Director de Medio Ambiente de la Municipalidad de Villa La Angostura Ing.

346
Daniel Meier y Jefe de sección de agua potable municipal Emiliano Quintupuray;
Bromatólogo Alejandro Murcia de la Municipalidad de Villa La Angostura a cargo de
asegurar y examinar la calidad de agua de la red pública; Jefatura de Operaciones del
C.O.E. Sr. Cristian Sandoval; generación de mapas, recopilación y actualización
permanente de información científico­técnica necesaria para orden operativo por parte
del Jefe de Inspectores de Obra de la Municipalidad de Villa La Angostura Emilio
Molla; Director de Obras Públicas de la Municipalidad de Villa La Angostura Sr. Mario
Cárdenas a cargo de la dirección de hombres y máquinas municipales; secretaría
ejecutiva de C.O.E., coordinación de información a los distintos componentes del
grupo de tareas Sra. Patricia Contreras; coordinación logística de C.O.E. de Sra. Valeria
Navarro, difusión de información Director de Prensa municipal Sr. Ariel Dominguez,
colaboración especial y constante de FM La Jungla, Guías de Montaña Sr. Fabián Fasce,
y centro de comunicaciones radiales a cargo de los Sres. Patricio Betanzo y Raúl
Pereyra.
El día 5 de junio se presentó el Ing. Martín Lizarrague delegado regional de Protección
Civil de Nación desde la ciudad de San Carlos de Bariloche quien asistió en la
organización y conformación del COE. El mismo día arribó el Ejército Argentino
conformándose el Agrupamiento Villa La Angostura (RIM 26 de Junín de los Andes,
Brigada de Ingenieros de Montaña y Sección de Inteligencia Bariloche a cargo del
Mayor Hernán Rodriguez Murgana) bajo las órdenes del Tnte. Cnel. Guillermo
Vergara (alternando el mando con el Tnte. Cnel. Hugo Tabbia) integrándose
inmediatamente al Comando de Operaciones de Emergencia. El día 6 de junio se
presentó el Lic. Rafael González de SEGEMAR tomando las primeras muestras de
material y primeras apreciaciones técnicas del fenómeno. El día 8 de junio se presentó
el Grupo de Control de Incendios de CORFONE bajo el mando del Sr. Norberto
Ocares. El día 16 de junio por disposición del Tnte. Cnel. Sergio Cristóbal, a cargo en
ese momento de la Sección de Inteligencia del Agrupamiento Villa La Angostura del
Ejército Argentino, tomando conocimiento de la información disponible en la Oficina
de Inspecciones de Obras y Dirección de Medio Ambiente municipales, interviniendo
en ello el Sr. Emilio Arias de la Dirección Provincial de Defensa Civil que proporcionó
un esquema teórico para los fines, dispuso la realización del Mapa de Riesgos a cargo
del Sargento 1° Gustavo Javier Figueroa, el Sr. Emilio Molla y el Prof. Alejandro García
Micocci. El trabajo en faz preliminar se entregó el día 23 de junio siendo expuesto al Sr.
Gobernador Jorge Sapag. Dicha cartografía proporcionó mayor orden a las operaciones
en curso y propició un perfil a las investigaciones y diagnósticos técnico científicos
realizados (algunos en proceso en la actualidad) primeramente por el Dr. Villarosa de
INIBIOMA­CONICET, el Dr. Caselli de UBA, Cedric Larcher, los Licensiados Rafael
Gonzalez, Alejandra Tejedo, Luis Fauque, Valerie Baumann y Manuela Elissondo de
SEGEMAR, grupo especialistas de ONU y Dr. Gustavo Córdova de la Universidad de
Nariño, Colombia. Sin lugar a dudas merece un informe especial aparte el voluntariado
de Villa La Angostura y las acciones realizadas tanto por personal de la Municipalidad
de Villa La Angostura como de las demás instituciones y aquellas personas que no son
identificables con ninguna de ellas por lo extraordinarias llevando a límites
insospechados sus capacidades individuales y técnicas.­

347
Martes 13 de diciembre de 2011

Proyecto de funcionamiento de Laboratorio


Municipal de Monitoreo de Riesgos Naturales y
Eventos Asociados

Introducción

Dada la situación geográfica particular de Villa La Angostura, más allá de los eventos
naturales a los que se encuentra sometida desde el día 4 de junio del corriente año con la
entrada en erupción del Complejo Volcánico Puyehue Cordón Caulle, hace que dichos
fenómenos se experimenten con gran intensidad en la localidad y por sus pobladores. La
erupción del CVPCC no ha hecho más que poner de manifiesto una realidad que sigue los
pasos de los tiempos geológicos y ha puesto a prueba y en evidencia las debilidades y
vulnerabilidades del desarrollo de Villa La Angostura. Puestos de cara ante el poder de la
naturaleza, hemos debido aceptar la necesidad de establecer sistemas de vigilancia constantes
para resguardar la salud de los habitantes y sus propiedades.

Principales objetos de vigilancia y recolección de información

� Sismología.­
� Vulcanología.­
� Clima.­
� Cambio climático.­
� Riesgo Geológico.­
� Riesgo Hídrico.­
� Interacción de los eventos naturales sobre las 19 hipótesis de riesgo principales
de Villa La Angostura.­

Funciones

� Elaboración y actualización de Mapa de Riesgo de Villa La Angostura (trabajo


en proceso, convenio con Ejército Argentino aún en proceso aguardando la
firma de las autoridades pertinentes, incluye formación de personal
municipal seleccionado para las tareas de mapeos). Acciones conjuntas con
Dirección de Defensa Civil de la Provincia del Neuquén.­
� Monitoreos de entorno natural (zonas de interés) dentro y fuera de área
urbana.­

348
� Recolección de información y reportes constantes a la Municipalidad de Villa
La Angostura (Intendencia).­
� Contacto permanente con Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad
de Villa La Angostura.­
� Informes a las áreas municipales pertinentes sobre exposición a riesgos
naturales de los proyectos en proceso de aprobación municipal. Apoyo a la
Dirección de Medio Ambiente.­
� Elaboración listado de estudios necesarios de bases de información sobre
riesgos naturales.­
� Contacto permanente con organismos internacionales (ONEMI, OVDAS,
SERNAGEOMIN, Red Nacional de Emergencias de Chile, ONU y/u otros).­
� Contacto permanente con diversas comisiones de estudio nacionales y/o
internacionales.­
� Contacto permanente con organismos nacionales (CONICET, INIBIOMA,
SEGEMAR, Servicio Meteorológico Nacional, Universidades Nacionales,
Protección Civil Nacional, Laboratorio de Clima).­
� Contacto permanente con organismos provinciales e interprovinciales
(direcciones de Defensa Civil provinciales y o municipales, Emergencias
Sanitarias de Salud Provincial, Dirección Provincial de Recursos Hídricos, AIC y
otros).­
� Contacto permanente con otras instituciones nacionales (Ejército Argentino,
Gendarmería Nacional, Parques Nacionales por ej.) y provinciales.­
� Nexo de integración con red provincial de emergencias.­
� Cobertura de monitoreo de eventos al aire libre o con gran concentración de
público en Villa La Angostura.­
� Extensión de información a otros organismos.­
� Disparadores de sistemas de alertas a nivel local, provincial y nacional.­
� Sistemas de alerta y procedimientos de evacuación de zonas de riesgo elevado
conjuntamente con Bomberos Voluntarios y Grupo de Rescate locales.­
� Interacción con Grupo K­Sar y Usar.­
� Protocolo de Rescate de Víctimas de Flujos de Lodo (Lahares Secundarios) en
Zona Urbana.­
� Protocolos y vías de evacuación y o asistencia inmediata ante emergencias de
los principales barrios y zonas de riesgo.­
� Relevamientos constantes de áreas de interés (riesgos) y habitantes.­
� Programas de capacitación a instituciones locales ante la actuación ante
emergencias provocadas por los posibles riesgos locales.­

Funcionamiento

� Actualmente el personal abocado a la tarea desarrolla actividades de lunes a


viernes en horario de 7,30 a 14,30 hs. (mismo horario del sector principal de
las dependencias municipales), por las tardes durante el tiempo requerido

349
por las tareas necesarias y/o necesidades del día (misma característica
seguida en fines de semana y otros días no laborables).­
� Los reportes de actividad volcánica, meteorología y rutas serán enviados a la
Intendencia a las 0900 y 2100 hs. todos los días.­
� Los informes especiales (monitoreos o informes de situación, por ej.) serán
enviados directamente a la Intendencia.­
� Reconocemos el carácter indispensable de centralizar la información y darle el
debido cuidado ante las posibles repercusiones de la difusión de las mismas
dado su tenor y contenido informativo.­
� La difusión pública o a otras instituciones u organismos de la información
recopilada o generada en el laboratorio, bajo todo aspecto e
indispensablemente, corresponderá a la Dirección de Prensa de la
Municipalidad previa revisión y remisión de la misma por los Sres. Vice
Intendente o Intendente (responsable máximo de la Protección Civil local)
municipales.­
� El laboratorio no tomará las decisiones, arbitrará el suministro de los mejores
medios disponibles para acompañar y asistir en la información y acción al
Intendente Municipal.­
� Cuanto mejor sea el equipamiento disponible y la información a la que se
accede en cuanto a calidad de datos, origen y cantidad con los que se cuente,
mayor será la precisión y calidad de la información obrante.­

Equipamiento necesario

� Vehículo doble tracción disponible 24 hs.­


� Computadoras (2) (actualmente en uso una de mediana capacidad
perteneciente al área municipal y notebooks y discos auxiliares de propiedad
de los miembros del laboratorio).­
� Programas ARCVIEW GIS y MAP con licencia correspondiente (el utilizado para
los mapeos realizados al igual que los medios electrónicos empleados
pertenece a la Sección de Inteligencia Bariloche del Ejército Argentino).­
� Elementos para recolección de muestras.­
� Base de radio y frecuencia única coordinando instituciones junto a la Dirección
de Protección Civil (gestionar frecuencia).­
� GPS (uso actualmente de elemento propio).­
� Teléfono celular con salida internacional (1) (disponible hasta la fecha).­
� Estación meteorológica completa con sensores de partículas en suspensión (si
bien se cuenta con las estaciones instaladas por SEGEMAR, los sensores de
medición de cantidad de partículas en suspensión favorecería la posibilidad
de emitir recomendaciones día a día a la población para el cuidado de la
salud) y radiación ultravioleta (la actual estación es un préstamo de Cerro
Bayo S.A.).­
� Monitor formato grande LCD para visualización de mapas e imágenes
satelitales.­

350
� Cámara digital (los actuales equipos de radios, informáticos, ópticos y cámaras
en uso son personales pertenecientes a los tres miembros del laboratorio).­
� Escritorios y/o mesas de trabajo.­
� Anticiparse a la necesidad de ejecutar convenios como el antes mencionado
con Ejército Argentino, SEGEMAR (por ejemplo, ya que los especialistas se
han encontrado y aún encuentran trabajando en la zona con contacto con
este laboratorio), INIBIOMA, CONICET, UNComa entre otros para llevar
adelante los estudios necesarios para un más detallado mapeo de riesgo
geológico e hídrico y obtener diagnósticos veloces sobre el/los materiales
recolectados así como para las áreas de Bromatología y Medio Ambiente
municipales en temas relativos a calidad del agua.­
� Esquema de interacción y colaboración inmediata con Dirección Provincial de
Defensa Civil y Dirección Nacional de Protección Civil.­
Sin lugar a dudas consideramos que aún queda mucho trabajo por delante en Villa La
Angostura y en ciertos aspectos la emergencia aún no ha terminado. Ciertos aspectos de la
emergencia actual se deben a los efectos del fenómeno eruptivo pero mucho otros se deben a
la gran vulnerabilidad contenida en el actual esquema de Villa La Angostura.
La vulnerabilidad de los pueblos se da:
1) Cuando la gente ha ido poblando terrenos que no son buenos para vivienda, por el
tipo de suelo, por su ubicación inconveniente con respecto a aludes, avalanchas,
deslizamientos, inundaciones, licuefacción, etc.­
2) Cuando ha construido casas muy precarias, sin buenas bases o cimientos, de
material inapropiado para la zona, que no tienen la resistencia adecuada, etc.­
3) Cuando no existe condiciones económicas que permitan satisfacer las necesidades
humanas (dentro de las cuales debe contemplarse la creación de un hábitat adecuado). Esta
falta de condiciones socioeconómicas puede desagregarse en desempleo o subempleo y, por
tanto, de falta de ingreso o ingreso insuficiente, escasez de bienes, analfabetismo y bajo nivel
de educación, formas de producción atrasadas, escasos recursos naturales, segregación social,
concentración de la propiedad, etc. Todos estos son elementos causantes de la vulnerabilidad
física que presentan algunos pueblos. Si los hombres no crean un "hábitat" seguro para vivir es
por dos razones: la necesidad extrema y la ignorancia. Ambas razones a su vez tienen causas
detectables y modificables, algunas de las cuales forman parte de la misma estructura social y
económica de un país. De otro lado, las precarias condiciones económicas son por sí mismas
también condiciones de vulnerabilidad, ya que la magnitud de daño real es mayor si la
población carece de los recursos a partir de los cuales pueda recuperarse (recursos
económicos: ahorros, seguro, propiedad de tierras, etc.; recursos naturales: formación,
criterios técnicos, elementos básicos de seguridad, conocimientos sobre las funciones de cada
organismo de ayuda, etc.; recursos sociales: organización, experiencia de trabajo conjunto,
participación comunal, etc.). Las condiciones de vulnerabilidad que una población presenta no
son condiciones que se hayan dado independientemente del hombre. Muy por el contrario, es
el mismo hombre quien las ha creado, y al hacerlo se pone de espaldas a la naturaleza,
corriendo el riesgo de resultar dañado si ocurriese un fenómeno natural determinado. Las
condiciones de vulnerabilidad se van gestando y pueden ir acumulándose progresivamente
configurando una situación de riesgo (que muchas veces se inadvierte, se trata de minimizar o
se menosprecia temerariamente). Así, por ejemplo, una vivienda cuando es nueva puede ser
segura y resistente para el medio en que uno vive, pero con el tiempo, debido al uso y la falta
de mantenimiento, podría deteriorarse y debilitarse hasta un límite en que resulta un
potencial sepulcro para sus ocupantes. En conclusión: hay condiciones de vulnerabilidad física
detrás de las cuales hay causas socioeconómicas. Hay pueblos que han sido construidos desde
su origen sin ningún o con muy poco criterio de seguridad y puede llamárseles vulnerables por

351
origen, y adicionalmente hay pueblos enteros, casas, canales de riego, reservorios, puentes,
etc. que con el tiempo van envejeciendo y debilitándose, debido a los factores señalados, a lo
cual denominamos vulnerabilidad progresiva.
El evento geológico que aún seguimos experimentando (a partir del evento eruptivo
del mes de junio, uno de los desastres más naturales a nivel mundial de los últimos años, no es
poco; ver información respectiva de la Organización de Naciones Unidas) hace 194 días no es
más que parte del proceso de crecimiento de la Cordillera de los Andes y su geografía cambia
irreversiblemente con continuos movimientos invisibles y casi imperceptibles y/o con eventos
espectaculares como el vivido en estos momentos. Aquí encontramos restos de bosques
sumergidos, bosques sepultados por lodo y tefra, árboles arraigados sobre arenas volcánicas,
únicos elementos que fijan el suelo en las laderas, árboles no mayores a 150 años (un
pestañeo geológicamente hablando) sobre las zonas hoy designadas áreas rojas de riesgo de
flujos de lodo. Villa La Angostura en su sector central más densamente poblado y con más
altos índices urbanísticos se encuentra en un llano aluvional surcado por decenas de cauces
superficiales y subterráneos que recorren el trayecto entre las montañas y el lago. Situados a
menos de 40 kilómetros de una de las fallas más activas del planeta (Liquiñe­Ofqui, la cual
tiene gran correlación e interacción con los sistemas volcánicos cercanos), no hacemos más
que proyectar sobre terreno de una dinámica implacable. Los fuegos que hierven bajo la
región han afectado a los pobladores y perfilado las montañas durante toda la historia y,
cuando parece poco probable que peores situaciones acontezcan en el transcurso de la vida de
los habitantes de alrededor de 30 años de edad, no hay duda de que, a la corta o a la larga,
llegarán. Es un agradable lugar para vivir, pero el que quiera disfrutar de ello debe ser
consiente de los riesgos y responsabilidades implícitos. Para los científicos, técnicos y demás
trabajadores de la protección civil el reto consiste en disparar alarmas con el tiempo suficiente
para que nadie salga herido. Para el decisor el desafío consiste en no interponer nada ni nadie
en el tránsito de los eventos naturales; el gobernante impulsar y lograr el buen desarrollo a
pesar de ellos.­

352
*Advertencia: a continuación se enumeran aquellos textos que han sido de apoyo técnico que no han sido
citados claramente en el interior del texto.

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Especifica
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o Peligro Volcánico, Centro Nacional de Prevención de Desastres, México D.F.
o Evaluación del Riesgo de Tipo Físico Natural y su Relación con el Planeamiento Urbano, Helga Valdivia
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o Vulnerabilidad, El Entorno Social, Político y Económico de los Desastres, Piers Blaikie, Terry Cannon y Ben
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o Evaluación de Riesgos de Orígen Natural y Plan de Contingencia, Elizabeth Valenzuela y Alejandro Silva, México
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o Damage to structures by pyroclastic flows and surges, inferred from nuclear weapons effects, Greg A.
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o Riesgo y Ciudad, Elizabeth Mansilla, Universidad Autónoma de México, México D.F.
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o Guía Metodológica para Procesos de Planificación para la Recuperación Posdesastres, UNEP­Comisión Europea
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o Guía Metodológica de Atención de Desastres, Desastres CR, Nicaragua
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o Estudios recientes y en proceso UNEP, SEGEMAR, CONICET, UNIVERSIDAD DE NARIÑO, SONY AT
BUFFALO.­
o Smithsonian­USGS Volcanic Atlas
*Prohibida la venta o reproducción total o parcial sin autorización del presente informe. Las
imágenes utilizadas pertenecen a NASA OVDAS, INIBIOMA CONICET UNCO, UBA,
SEGEMAR, Emilio Molla, Cristian Sandoval, Marina Frixione, Grupo de Rescate de Villa La
Angostura, Municipalidad de Villa La Angostura, Reuters, United Press, Ejército Argentino,
Universidad de Chile, Universidad Católica de Chile.­,
Villa la Angostura, 09 de diciembre de 2011

Cristian M. Sandoval Emilio R. Molla Patricia contreras David Tressens


DC, MVLA DC, MVLA DC, MVLA DC, MVLA

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